ALGUNAS MALAS Y BUENAS PRÁCTICAS EN

MATERIA AMBIENTAL EN AGENCIAS

AUTOMOTRICES.

ANGELSHAI BUREAU AMBIENTAL, S.A. DE C.V. M.A. Hernández Quevedo JULIO, 2015

ANTECEDENTES La Asociación Mexicana de Distribuidores de Automotores, A.C., ha venido realizando

una campaña de convencimiento con los diferentes distribuidores, con el objeto de que

ingresen voluntariamente al Programa Nacional de Auditoria Ambiental, instrumentado

por la Procuraduría Federal de Protección al Ambiente desde 1992, ya que esto les ha

permitido asegurar el cumplimiento normativo ambiental, considerando las disposiciones

federales, estatales y municipales, aplicables al distribuidor.

Uno de los requisitos que son ahora obligados en un proceso de auditoría ambiental, de

acuerdo a lo establecido en la Norma Mexicana NMX-AA-162-SCFI-2012, es evitar la

existencia de malas prácticas tanto ambientales como operativas, que conlleven a tener

situaciones que impliquen riesgos, que pudiesen afectar tanto al personal laboral como a

las propias instalaciones y al medio ambiente.

Por tal motivo y como una ayuda práctica al distribuidor, AMDA se ha dado a la tarea de

resumir algunas de las malas prácticas recurrentes, ambientales y operativas, que han

sido resultado del análisis de cerca de trescientas cincuenta auditorías ambientales

realizadas en agencias automotrices de las diferentes marcas, ubicadas en el interior del

país.

SITUACIONES QUE PRESENTAN RIESGOS DE

INCENDIO Y/O EXPLOSIÓN

INSTALACIONES ELÉCTRICAS:

• El suministro eléctrico, como en todo negocio o empresa, en un insumo básico necesario para la operación de una agencia automotriz. Esta se usa en la operación de la maquinaria y equipo; iluminación interna y externa, sistemas de ventilación y aire acondicionado, equipo de cómputo, sistemas de comunicación, etc.

• A continuación se presentan algunas malas prácticas observadas, mismas que representan un riesgo de incendio:

• Tener instalaciones eléctricas improvisadas para

servicios de carácter permanente

• Tener sobre cargados circuitos.

• Dejar conectados celulares.

• Dejar prendidos radios o parrillas.

• Tener cables sueltos sin protección o cajas de

conexiones sin tapa, tableros abiertos y sin

identificación de riesgo eléctrico y voltaje

manejado.

• Emplear extensiones añadidas y mal aisladas.

• No emplear instalaciones selladas a prueba de

explosión en áreas donde se manejen materiales

inflamables.

TIERRAS FÍSICAS Y PARARRAYOS.

La mayoría de las agencias automotrices cuentan con

instalaciones de tierras físicas, que les permiten disipar la

electricidad estática contenida en la maquinaria, equipo y

estructuras. Algunas cuentan con pararrayos, cuyo

propósito es proteger a la instalación de descargas

atmosféricas.

Las malas prácticas observadas son las siguientes:

• Conexiones de tierras físicas cubiertas de pintura que

impiden la conducción de la electricidad estática.

INSTALACIONES DE GAS LP.

El gas LP normalmente es empleado en los hornos-cabina de

aplicación de pintura, aunque también puede usarse gas natural,

aunque no es muy frecuente. El gas LP también se utiliza aunque

en menor volumen, en comedores de empleados y calentadores de

tipo doméstico.

Algunas malas prácticas observadas se presentan a continuación:

Tuberías:

• Sujetar tuberías con alambre.

• Usar abrazaderas sin material aislante para evitar el contacto

metal-metal, para el soporte y fijación de la línea.

• Utilizar las orejas de izar de tanques estacionarios de gas LP,

como medios de soporte para tuberías.

• Tener instalaciones ocultas sin conocer, de manera precisa, el

material de construcción (acero al carbón, cobre, PVC), si es

tubería roscada o soldada, su trayectoria, y si cuenta con alguna

protección contra corrosión, ejemplo: enchaquetado, enfundado,

encofrado con concreto.

• Colocar tuberías sobre estructuras metálicas, sin ninguna

separación, para evitar el contacto metal-metal.

• Colocar tuberías entre el falso plafón y el techo.

• Tener líneas eléctricas o bajadas de pararrayos junto a tuberías de

conducción de gas LP o gas natural.

• No contar con válvulas de cierre rápido, para cada equipo de

consumo.

• No taponear la línea, pese a que se tenga una válvula, en el

supuesto caso de que esta no esté conectada al aparato de

consumo.

• No tener pintada toda la tubería de gas de color amarillo y

debidamente identificada con el nombre del fluido y la dirección de

flujo, desde el tanque hasta los equipos de consumo.

Tanques de tipo estacionario

• Ubicarlos en espacios cerrados con poca ventilación.

• Colocarlos sin protección perimetral, en sitios donde sean

susceptibles de ser golpeados por el paso de vehículos.

• Colocarlos sobre estructuras inseguras o con espacios reducidos,

que dificulten su inspección y mantenimiento.

• Colocarlos juntos a muros, sin una separación mínima de 60

centímetros.

• Colocarlos directamente sobre terreno natural, sin que estén

sobre una losa de concreto.

• No tenerlos debidamente soportados sobre bases firmes

horizontales.

• Tenerlos expuestos a ambientes corrosivos y sin proporcionarles

protección o un mantenimiento adecuado.

• No tener rotulados los tanques con las señalizaciones de

advertencia, como son: nombre del gas almacenado, capacidad

en litros de agua y rombo de comunicación de riesgos.

• No tener procedimientos o instructivos básicos de las medidas de

seguridad a seguir, para las operaciones de llenado.

Cilindros de tipo doméstico:

• No colocarlos en áreas ventiladas.

• No tenerlos debidamente sujetados,

pudiéndose caer por movimientos

involuntarios.

• A la intemperie, sin protección contra la

lluvia.

• Colocarlos sobre terreno natural, sin contar

con una base sólida de concreto.

• Colocarlos en sitios donde puedan ser

impactados.

OTROS GASES COMPRIMIDOS

Algunas agencias automotrices, manejan gases comprimidos inflamables

y comburentes, principalmente en las áreas de hojalatería y pintura, donde

se emplean equipos de oxicorte que emplean oxígeno y acetileno.

También se maneja bióxido de carbono y en ocasiones argón, en

máquinas de soldadura por micro alambre, que aunque no son gases

inflamables, el hecho de mantenerlos a presión ofrece un riesgo.

A continuación se presentan algunas malas prácticas observadas:

• Tener equipos de oxicorte en áreas no ventiladas, o en lugares donde

puedan recibir impactos por el movimiento interno de vehículos.

• Tener deteriorados los manómetros y válvulas de los cilindros.

• Tener las mangueras añadidas o en el piso, con riego de que sean

pisadas o pudiesen presentar fugas.

• Tener los cilindros sin sujeción o con sujeciones improvisadas, para

evitar que estos puedan caer por movimientos involuntarios.

• Colocar los equipos de oxicorte junto a máquinas herramienta que

generan chispa, por ejemplo: esmeriles.

• No tener señalizados los cilindros con el nombre del gas y el rombo de

comunicación de riesgos.

RECIPIENTES SUJETOS A PRESIÓN.

Estos equipos son básicos en una agencia automotriz, ya que

una buena parte de sus equipos y herramientas operan de

manera neumática. También se emplean en las cabinas de

aplicación de pintura y en las áreas de lavado de autos.

Se han observado las siguientes malas prácticas:

• No tener anclados los recipientes sujetos a presión, y no

contar con medios de absorción de vibraciones, entre las

patas del recipiente y el piso.

• Tener las poleas y bandas sin su guarda de protección.

• Tenerlos en espacios reducidos o junto a otros equipos o

materiales que dificulten su inspección.

• Canalizar las purgas de compresores directamente al piso o

a redes de drenaje, ya sean pluviales o sanitarias, o a

terreno natural.

• No contar con registros de mantenimiento, para verificar las

condiciones operativas del equipo y el funcionamiento

correcto de sus dispositivos de seguridad y manómetros.

OTRAS TUBERÍAS.

Además de las líneas de gas LP, otras tuberías que se manejan

en una agencia automotriz, son las que conducen agua, aire

comprimido e instalaciones eléctricas. Algunos distribuidores

manejan aceite limpio y sucio a través de tuberías y muy pocas

cuentan con redes hidráulicas contra incendio, ya que la gran

mayoría presentan grados ordinarios de incendio y no requieren

de este tipo de sistemas.

A continuación se presentan algunas malas prácticas observadas:

• Colgar letreros en tuberías.

• Soportar tuberías con otras líneas. Ejemplo: Líneas eléctricas

con tuberías de aire comprimido o viceversa.

• No tener identificadas las tuberías de acuerdo al fluido

transportado, pudiendo ser peligroso o no peligroso. Ejemplo:

aire comprimido, que dependiendo de la presión que se

maneje, puede ser considerado un fluido peligroso o no

peligroso, de acuerdo a la NOM-026-STPS-2008.

ALMACÉN TEMPORAL DE RESIDUOS PELIGROSOS.

Esta instalación es básica y necesaria en cualquier agencia automotriz, además de ser un

requerimiento normativo, ya que en ella se albergan los residuos peligrosos generados, que

normalmente son aceites y filtros usados, trapos impregnados, recipientes vacíos que

contuvieron alguna sustancia peligrosa, baterías usadas, lámparas fluorescentes, entre otros.

Las malas prácticas que se han observado son las siguientes:

• Instalarlo junto a áreas de riesgo. Ejemplo: tanques de almacenamiento de gas LP,

transformadores eléctricos.

• Almacenar otros materiales o equipos que no sean propiamente residuos peligrosos.

• Contar con instalaciones eléctricas que no sean selladas a prueba de explosión.

• No contar con dique o dispositivos de contención de derrames.

• Tener ingreso de agua de lluvia.

• No tener debidamente identificados los recipientes que contienen los residuos peligrosos.

• Manejar recipientes conteniendo aceite usado, sin tapa.

• Mezclar otros fluidos automotrices con el aceite lubricante usado.

• Mezclar recipientes vacíos metálicos con recipientes de plástico.

• Colocar baterías usadas junto a materiales combustibles e inflamables.

• Tener acumulación de derrames en diques o dispositivos para su contención.

• No ser instalaciones de acceso restringido.

• Tener instalaciones subterráneas, por ejemplo, recipientes para almacenar aceite usado.

AREAS DE MANEJO Y ALMACENAMIENTO DE RESIDUOS NO

PELIGROSOS.

Toda agencia automotriz también genera residuos sólidos no

peligrosos, también denominados residuos de manejo especial. Nos

referimos a: cartón, papel, madera, plástico, residuos de comida y

de tipo sanitario, residuos de jardinería, entre otros.

Estos residuos al igual que el caso de los residuos peligrosos,

también deben ser controlados:

A continuación se muestran algunas malas prácticas observadas:

• Tener mezcla de residuos peligrosos con no peligrosos.

• No tener una separación efectiva por tipo de residuo.

• Presentar problemas de orden y limpieza.

MANEJO DE SUSTANCIAS PELIGROSAS.

Las principales sustancias peligrosas que se manejan en una

agencia automotriz son: aceite lubricante, fluidos automotrices,

como son: anticongelantes, líquido de frenos, limpiadores del

cuerpo de aceleración, gasolina, thinner y pinturas base solvente

en hojalatería y pintura, entre otros:

Las malas prácticas observadas son:

• Tener recipientes conteniendo sustancias peligrosas sin

ninguna identificación.

• Utilizar envases de refresco o algún otro producto alimenticio

para almacenar sustancias químicas o materiales peligrosos,

Ejemplo: Thinner, gasolina, aceite lubricante, diesel,

compuestos de cloro, materiales ácidos anti sarro, etc.

• Falta de dispositivos de contención para captar derrames

fortuitos.

INSTALACIONES HIDRÁULICAS.

El agua es otro insumo imprescindible para una agencia

automotriz. El principal uso del vital líquido es en las

operaciones de lavado de autos, aunque también se

emplea en buena medida en los servicios sanitarios del

personal y en menor cantidad, para el riego de áreas

verdes.

Algunas malas prácticas observadas son:

• Presencia de fugas en tuberías y válvulas.

• Tapas de registros agrietados o rotos, en el interior del

taller mecánico, susceptibles de recibir derrames

fortuitos de sustancias o residuos peligrosos.

• Trincheras de tormenta saturadas con residuos.

SUELO.

Prácticamente todas las agencias automotrices cuentan con

pisos de concreto armado, y algunos de ellos recubiertos

con materiales epóxicos, que los hacen totalmente

impermeables y de fácil limpieza. Sin embargo, algunos

distribuidores tienes patios de suelo natural, que son

utilizados para el resguardo de vehículos siniestrados.

Las malas prácticas observadas son:

• No utilizar charolas o dispositivos para captar derrames

de autos siniestrados, para evitar contaminación a suelo

natural.

• Disponer residuos junto a los autos siniestrados.

• No sellar juntas de expansión en áreas susceptibles de

derrames.

RUIDO.

Algunas de las operaciones que se realizan en una agencia

automotriz generan ruido, principalmente el uso de

compresores y herramientas neumáticas.

Normalmente el ruido generado constituye un aspecto de

índole laboral; sin embargo, si el ruido generado rebasa las

fronteras de la agencia, puede ocasionar un problema de

salud, dependiendo de las colindancias que se tengan,

concretamente si se tienen áreas habitacionales.

Las malas prácticas observadas, bajo ese tenor, son:

• Tener equipos ruidosos cerca de los límites del predio de la

agencia, sin protección acústica suficiente.

• Tener compresores sin medios de atenuación de

vibraciones.

ORDEN Y LIMPIEZA.

Una agencia automotriz, al igual que otro tipo de empresa,

presenta problemas de orden y limpieza, normalmente derivados

de la falta de procedimientos, supervisión y capacitación del

personal. Frecuentemente se observan más problemas de orden y

limpieza en áreas de hojalatería y pintura que en el propio taller

mecánico.

Otras áreas que también suelen presentar problemas de orden y

limpieza, son las áreas periféricas o algunas áreas de servicio que

no son frecuentemente visitadas, lo que propicia el descuido de las

mismas.

A continuación de presentan algunas malas prácticas observadas:

• Sobre acumulación de materiales combustibles que

incrementan el grado de riesgo de incendio, ejemplo: cuarto de

archivo muerto y almacén de garantías, cuartos de enseres de

limpieza.

EXTINTORES.

Los extintores son el equipo básico para combatir un incendio

incipiente. Con este equipo es el que cuentan las diferentes

agencias automotrices. Por el grado de riesgo de incendio que se

tiene, que comúnmente es “ordinario”, de acuerdo a lo

establecido en la NOM-002-STPS-2010, este es el equipo contra

incendio que es obligatorio tener, además de algunos detectores

de humo en áreas críticas.

Algunas de las malas prácticas observadas son:

• Tener obstruidos extintores y no señalizados.

• No tener una supervisión eficiente, que garantice que estos

equipos básicos se encuentren siempre en condiciones

óptimas de uso.

• Colocar extintores en áreas de estacionamiento, pudiendo ser

golpeados por los vehículos.

USO EFICIENTE DE LA ENERGÍA.

Por último, hoy en día, el ahorro de energía se ha convertido en una responsabilidad para

todos, debido fundamentalmente a los problemas ambientales que invaden al mundo entero

y que han sido consecuencia de un uso desmedido de combustibles, que han favorecido el

calentamiento global en el planeta, con las bien conocidas consecuencias.

Sobre este particular, las malas prácticas que a continuación se presentan inciden en tener

desperdicios de energía y no utilizar el recurso de una forma eficiente.

• Tener varios circuitos que se encienden o apagan empleando un solo interruptor.

• Tener fugas de aire comprimido, lo que propicia la operación innecesaria de los

compresores.

• Tener ajustados los sistemas de aire acondicionado a temperaturas demasiado frías.

• Dejar encendidas luces o mantener operando equipos de aire acondicionado o

ventiladores, en lugares donde no hay personal.

• Emplear focos incandescentes o luminarias de alto consumo.

• En la medida en que las agencias automotrices aprovechen más eficientemente la

energía eléctrica utilizada, obtendrán beneficios económicos y al mismo tiempo,

coadyuvarán indirectamente a abatir los regímenes operativos de las centrales

termoeléctricas, con el consecuente abatimiento de las emisiones a la atmósfera.

CONCLUSIONES.

El minimizar o erradicar algunas de las malas

prácticas ambientales y operativas observadas,

permitirá al distribuidor tener instalaciones

limpias y ordenadas, disminuyendo los riesgos,

lo que le facilitará cumplir con la mayor parte de

las exigencias normativas ambientales

aplicables, sin tener que realizar grandes

erogaciones.

El ahorrar energía, le permitirá abatir costos y

colaborar indirectamente en el abatimiento de los

problemas ambientales que aquejan al país.