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Arquitectura Popular de la Comarca de la Jacetania: Abena
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ABENA
COMUNIDAD AUTÓNOMA: ARAGÓN
PROVINCIA: HUESCA
COMARCA: JACETANIA
ZONA: VAL DE ABENA
TÉRMINO MUNICIPAL: JACA
LOCALIDAD O PEDANÍA: ABENA
C. UTM: 876 m
FORMA DE ACCESO: Salir de Jaca por la N- 330
en dirección Sabiñánigo hasta encontrar el desvío a
Navasa. Tras atravesar su casco urbano, se debe
continuar por la carretera que conduce hacia el Hostal
de Ipiés (HU-V-3011), donde encontraremos el
desvío a Binué.
DEMOGRAFÍA DE ABENA
Abena se levanta a 876 metros de altitud en el corazón del valle al que da nombre.
Formó parte del municipio de Binué junto con Ibort y Rapún hasta que, a finales del siglo
XIX, Abena le sustituyó como cabecera municipal. En 1943 se incorporó al municipio de
Navasa hasta que, veinte años más tarde, en 1964 pasó a depender del de Guasa.
Finalmente en 1966 se incorporó al de Jaca, al que pertenece en la actualidad.
El fogaje o censo del Reino de Aragón mandado elaborar por Fernando el Católico
en 1495, otorgaba a Abena 10 fuegos. Madoz en su Diccionario elaborado entre 1845-
1850 nos dice de Abena: con ayuntamiento en la provincia de Huesca […] situado en un
cerro combatido de los vientos E. y O.: su clima es sano. Forman la población 14 casas y
una iglesia bajo la advocación de San Miguel. […]Población: 19 vecinos, 117 almas.
En 1900 contaba con 175 habitantes iniciándose desde entonces un descenso
progresivo de su población hasta contar con 21 en 2003.
NOMBRES DE LAS CASAS
Nombres de algunas de las casas: Casa Basilio; casa Gregorio; casa Juan Blas; casa
Lucas; casa Orencio; casa Patro; casa Valentín de abajo; casa Herrero; casa Bartolo;
casa Pedro Ubieto; casa Caponé; casa Pelaire; casa Casbas; casa Sastre; casa Tejedor;
casa Aso; casa Miguel Abarca; escuelas.
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CARACTERÍSTICAS GENERALES DE LAS CASAS DE ABENA
Ejemplo de pueblo- calle, la mayoría de las casas de Abena se disponen a uno y
otro lado de la calle principal (así llamada), que recorre la población en sentido
longitudinal este- oeste, y a la que se abren de forma perpendicular las otras 3 mínimas
calles de la localidad: Calle del Arco, El Cantón y de la Fuente. Las casas del casco urbano
de Abena responden a las características generales de la arquitectura popular en el Campo
de Jaca.
Así, el entramado urbano de la localidad se organiza o bien mediante casas
unifamiliares aisladas (casa Basilio y casa Tejedor), o mayoritariamente, con viviendas
en hilera compartiendo muros de medianería. Aunque no es habitual encontramos un
ejemplo de callizo de unos 30 cm. como elemento de separación e individualización de las
casas (casa Herrero).
Viviendas en hilera de Abena casa Basilio ejemplo de vivienda aislada Callizo de casa el Herrero
Respecto a las tipologías de casas, en el núcleo de Abena son mayoritarias las
denominadas casa- bloque (tipo al que responden la mayoría de la casas), aunque la casa
el Herrero quizás pueda ser catalogada dentro del tipo de casa- patio en la que a los lados
de un patio exterior se disponen separados los edificios domésticos y los de servicios.
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Los edificios domésticos de Abena presentan en su mayoría planta rectangular y
generalmente constan de tres pisos (algunas casas han levantado otro piso a comienzos del
siglo XX): en la planta baja está el patio, masadería, bodega, cuadras y zolles; en el primer
piso encontramos como elemento principal y distribuidor de todo el espacio doméstico la
cocina. En este segundo piso se encuentra también la sala y los dormitorios, con o sin
alcobas. Por último y como remate de toda la estructura, el tercer piso lo ocupa la falsa.
Las construcciones se realizan a base de piedra tallada en mampuestos,
reservándose el sillarejo para reforzar las esquinas, mientras que la piedra sillar bien
escuadrada se emplea para las embocaduras de vanos y puertas. En la mayoría de las
viviendas de la localidad, los muros se presentan revocados (en blanco o en otras
tonalidades) destacando las embocaduras de los vanos y los esquinazos con la piedra en su
color (casa Basilio, casa Herrero, casa Miguel Abarca…). Mucho menos habitual es que
los edificios presenten los muros con la piedra vista (casa Pelaire y casa Tejedor).
Casas de Abena con muros revocados y sillares en esquinazos Casa Pelaire con la piedra vista en su color
En las fachadas los vanos, puertas y ventanas, se distribuyen de manera irregular,
respondiendo a las necesidades de las habitaciones interiores y no respetando, por lo
general, ninguna ley de simetría.
Respecto a las puertas de las casas, existen ejemplos tanto de portadas en arco de
medio punto dovelado (casa Herrero, casa Miguel Abarca – fechada en 1802 en la clave-
…), como en arco rebajado con la clave tallada como arquillo conopial (casa Pelaire).
Buen ejemplo de portada adintelada es la de casa Tejedor con dintel monolítico labrado
con muesca conopial y apeado en jambas rectas.
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Puerta de Casa
Miguel Abarca y
detalle de la
clave fechada en
1802 →
Puerta de casa Pelaire con arco comopial
En el apartado de las puertas de Abena merece una mención especial la de casa
Basilio resuelta mediante arco rebajado apoyado en jambas rectas labradas con rostros
humanos (un masculino y otro femenino) y con la inscripción: Ave María Purísima.
Ramón Pardo. Año 1808. El significado de estos elementos se explica en el apartado de
creencias, símbolos y ritos de protección de las casas.
Portada de Casa Basilio de Abena ↑→
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Respecto a las ventanas, éstas son de pequeño tamaño en relación con la fachada,
normalmente con adinteladas, cuadradas o rectangulares y muchas veces con cabeceros,
jambas y alféizar de sillar. Ejemplar excepcional de ventana se presenta en la fachada
principal de casa el Herrero, con cabecero labrado con dos hexafolias y una cruz. Llama la
atención como en las ventas de bastantes de las viviendas de la localidad se hace patente la
influencia del arte gótico, con mínimas ventanas con cabeceros de sillar labrados a la
manera de arquillos conopiales y con alféizar tallado en un bloque y moldurado, dispuesto
en voladizo sobre la línea de fachada (ejemplos de estas ventanas existen, entre otras en
casa Pelaire, en la fachada posterior de casa Miguel Abarca, en casa Tejedor…).
Ventana de casa Pelaire otra ventana goticista
Ventana de casa el Herrero
En el apartado de vanos debemos destacar igualmente
cómo en las viviendas de Abena se hizo frecuente, a lo largo de los
siglos XIX y XX la apertura de pequeños balcones tipo ventana o
de grandes balcones secaderos, situados en la fachada principal o
en fachadas secundarias, buscando siempre la orientación al sur.
Estos balcones normalmente cuentan con suelo de grandes losas de
piedra y antepechos de forja.
Balcón tipo ventana de una casa de Abena orientado al sur →
En las viviendas de Abena sólo hemos podido localizar dos inscripciones, una en
casa Miguel Abarca (portada fechada en 1802) y otra en casa Basilio (fechada en 1808).
Ambas inscripciones se refieren a comienzos del siglo XIX y pueden referirse, o bien a la
fecha de construcción de la casa, o bien a alguna reforma efectuada en la vivienda
preexistente.
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En relación con las cubiertas de las casas, las viviendas tradicionales de Abena
utilizaban tradicionalmente la losa de piedra asentada sobre tasca como materila de
cubrición, de la que aún quedan buenos ejemplares como en casa Pelaire, así como en las
construcciones auxiliares (pajares o cuadras) de la localidad. Sin embargo, la mayoría de
las casas han sustituido este material por otros más modernos, aunque menos respetuosos
con la tradición como la Uralita y la teja moderna. La inclinación de las cubiertas no
sobrepasa los 30º, respondiendo al clima duro del invierno en la Val de Abena, pero más
benigno que en los altos valles donde la habitual presencia de la nieve hace que la
inclinación del tejado sea mayor. Las cubiertas más habituales en la localidad vierten a dos
aguas con el cernillón paralelo a la línea de fachada. Existe también algún ejemplar con
cubierta a tres y cuatro aguas.
← Casa Pelaire. Ejemplo de vivienda
tradicional con tejado de losa a dos vertientes
y cernillón dispuesto en paralelo a la línea de
fachada. El alero sobre el que se dispone el
tejado se compone de cinco hiladas de losas de
piedra dispuestas cada vez más voladas sobre
la fachada.
En cuanto a los aleros, lo habitual es que vuelen poco sobre la línea de la fachada y
normalmente son de tablas de madera apoyadas sobre canes lisos del mismo material. En
otros casos, son las propias losas del tejado las que sobrevuelan en voladizo sobre la
fachada haciendo el oficio de alero sin ningún otro artificio. Existen también ejemplos de
aleros de sillar sobre canetes de piedra. Y curioso ejemplar de alero es el que se dispone en
casa Pelaire, compuesto de hasta cinco hiladas de losa dispuestas cada vez más voladas
hasta conformar el alero.
Respecto a las chimeneas o chamineras de Abena, realizadas en tosca, la mayoría
han sido rehechas en época moderna, siguiendo los usos tradicionales. La práctica totalidad
son troncocónicas, aunque también existe algún ejemplar tronco piramidal.
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CREENCIAS, SÍMBOLOS Y RITOS DE PROTECCIÓN DE LAS CASAS
Respecto a las creencias, símbolos y ritos de protección de las casas de Abena, debemos
destacar la excepcional portada de casa Basilio. Resuelve en arco dovelado rebajado
apoyado en jambas rectas labradas con sendos rostros,
masculino y femenino, así como con una flor de cuatro pétalos
en la clave. Rodeando toda la portada la inscripción: Ave María
Purísima. Ramón Pardo. Año 1808.
Los dos rostros figurados, un hombre y una mujer, que decoran
cada una de las jambas de la portada son dos motilones, que
podrían estar representando, en opinión
de Fernando Biarge a los antepasados de
la familia, de hecho son la representación del culto totémico a los
antepasados, el tronco del árbol familiar cuyo recuerdo está
presente en todo momento en el devenir de la casa. Se colocarían,
por tanto, como recuerdo de los antepasados, de forma que protejan
a sus descendientes y puedan dar así continuidad a la Casa. Pero
además de esta protección que podríamos considerar como de origen pagano, la portada
presenta una inscripción religiosa Ave María Purísima, de forma que la Virgen vele
también por los familiares. La portada se completa con la fecha y el nombre, Ramón Pardo,
posiblemente el propietario en ese momento.
En este apartado también debemos destacar una de
las ventanas de casa el Herrero, cuyo cabecero está
labrado con dos hexafolias y una cruz. De nuevo, motivos
“paganos” las hexafolias, se mezclan con el símbolo
cristiano de la cruz. La hexafolia es un símbolo solar muy
repetido en el arte popular, consistente en un círculo dentro
del cual se inserta una flor de seis pétalos.
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OTRAS CONSTRUCCIONES AUXILIARES DE LA ARQUITECTURA POPULAR
Abena contó antiguamente con herrería pero hoy en día no se conserva nada de
ella. La población tuvo molino en el llamado “barranco de Ara” pero ya está espaldado.
Según nos contaron los vecinos del pueblo, cada casa tenía su propio horno de pan, pero
los antiguos fueron desmontados hace años. Sin embargo, enfrente de casa Basilio puede
contemplarse hoy en día un buen horno de pan (propiedad de esa casa), rehecho en 1952 en
el espacio que antiguamente ocupaba un lagar. Presenta muros de mampostería y cubierta
de losa a dos vertientes.
Horno de pan de casa Basilio. Rehecho en 1952.
Finalmente reseñar que las viviendas de Abena no tenían pozos de agua, pues iban
a la fuente para proveerse de ella. En la fuente existía un lavadero, hoy en día, perdido.
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BIBLIOGRAFÍA
- BIARGE, Fernando y BIARGE, Ana, Líbranos del Mal. Creencias, signos y
ritos protectores en la zona pirenaica aragonesa, 2000, Pág. 71 (puerta Casa
Basilio).
- MADOZ, Pascual, Diccionario geográfico- estadístico- histórico de España y sus
posesiones de Ultramar, 1845- 1850, ed. Facsímil, D.G.A., 1985.
- RÁBANOS FACI, Carmen,
o La Casa Rural en el Pirineo Aragonés, ed. Instituto de Estudios
Altoaragoneses, 1990, Pág. 135-148 (estudia la arquitectura tradicional del
campo de Jaca)
o Arquitectura popular aragonesa, ed. Moncayo, Zaragoza, 1996, Pág. 59.
- UBIETO ARTETA, Antonio, Historia de Aragón. Los pueblos y los despoblados,
Zaragoza, 1985.
CATALOGADOR: BELÉN LUQUE HERRÁN
FECHA: 25/03/2009