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stock qei claves En la obtención y el análisis de las prue- bas y objetos relacionados con el cri- men, la química juega un papel esencial y creciente. El Sherlock Holmes del siglo XXI seguiría quizás con su pipa, pero cambiaría su lupa por un espectróme- tro de masas; un equipo de PCR, para el análisis de ADN; un microscopio elec- trónico y otras muchas herramientas que utiliza la química hoy día. El desa- rrollo y transformación de la

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Quimica forense -

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stockxpertqei claves

En la obtencin y el anlisis de las prue- bas y objetos relacionados con el cri- men, la qumica juega un papel esencial y creciente. El Sherlock Holmes del siglo XXI seguira quizs con su pipa, pero cambiara su lupa por un espectrme- tro de masas; un equipo de PCR, para el anlisis de ADN; un microscopio elec- trnico y otras muchas herramientas que utiliza la qumica hoy da. El desa- rrollo y transformacin de la qumica y otras disciplinas cientficas en los lti- mos aos ha contribuido a la creacin de las Unidades de Polica Cientfica. El criminal est ahora ms indefenso ante la investigacin policial. | Fernando Torrecilla

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] n. 583 junio-julio 2009 Drogas en el aire | pg 17

Qumica con gancho | pg 18

La acreditacin de la ENAC, imprescindible para los laboratorios de anlisis de ADN para uso forense | pg 21

Qumica al serviciode la justicia

[]n. 583 junio-julio 200915qei Qumica e Industria

Lejos de la escena del crimen, un grupo de policas especiali- zados estudia en sus laboratorios rastros invisibles, que los cri- minales difcilmente pueden ocultar, y que permiten resolvercasos aparentemente complicados. Son los llamados policas cien- tficos, los que utilizan la qumica y otras ciencias para aportar nue- vas pruebas ante los tribunales de justicia para contribuir a la reso- lucin de los hechos delictivos. Su evolucin ha sido espectacular durante los ltimos aos y, gracias a series de televisin como CSI, han popularizado su actividad y provocado un mayor inters social, despertando incluso vocaciones cientficas entre muchos jvenes.El incendio del Liceo en Barcelona en 1994, el crimen de Alfaz del Pi o el asesinato de la joven sevillana Marta del Castillo son slo algunos ejemplos de casos mediticos en los que la polica cien- tfica ha tenido un papel protagonista. La obtencin y anlisis de los rastros qumicos en la escena del crimen es la labor de un gru- po de hombres y mujeres que se valen de sus conocimientos cien- tficos para aclarar los hechos ocurridos. Casi nada escapa a las pro- betas de la polica.El espectacular desarrollo y evolucin de la qumica ha trans- formado, en menos de dos siglos, la economa y la sociedad y, como es lgico, tambin la ciencia forense. Enfocar el problema con los conocimientos y la metodologa cientfica proporciona una expli-

cacin slida y veraz sobre los acontecimientos acaecidos. En este sentido, la criminologa se ha valido de este desarrollo y no cabe la concepcin de un futuro en esta disciplina sin la investigacin forense como un pilar bsico.Pelos, huesos, colillas de cigarrillos, sangre, dientes, esperma, uas y cualquier otro resto biolgico pueden ser determinantes en la investigacin. Pero tambin fibras de ropa, marcas y araa- zos, cristales y residuos de disparos se convierten en testigos mudos ms all de las tradicionales huellas dactilares. Las prue- bas fsicas deben ser interpretadas por profesionales con conoci- mientos sobre las propiedades de la materia y los estados en que puede encontrarse.

Qumica forenseJunto a la biologa, la odontologa, la antropologa, la patologa y la psicologa, la qumica es una de las principales reas de la cien- cia forense. Francisco Ramrez, jefe de la Seccin de Unidad de An- lisis de la Polica Cientfica de la Comisara General de Madrid, expli- ca que hoy en da la aportacin de la polica cientfica a la investigacin policial es tan importante que est dentro del pro- tocolo de actuacin hacer partcipe de los hechos a la rama cien-tfica de la polica. 4

Al lugar del crimen llega la polica cientfica para buscar huellas, muestras y cualquier cosa que ayude a identificar al culpable.

qeiclaves

4Desgraciadamente la labor de la polica cientfica tiene ms repercusin social cuanta mas relevancia tiene el hecho investigado, independientemente de la dificultad cientfica de los estudios. Estn en la mente de todos casos de grandes catstrofes como el accidente del avin de Spanair en Barajas el pasado verano o aten- tados terroristas como el de diciembre de 2006 en la terminal T4 de Madrid o el tristemente recordado 11 M, seala el funcionario policial, que explica que en estos casos la labor rutinaria de la poli- ca se ve desplazada y se ponen todos los medios materiales y huma- nos en una nica investigacin, en un primer instante para rea- lizar la identificacin lo ms fiable y rpido posible de los cadveres y, paralelamente, para la identificacin de los autores y los medios empleados para llevar a cabo el ataque terrorista.

A principios del pasado mes de abril, una joven de 17 aos fue asesinada mientras dorma al recibir dos impactos de bala en la cabeza en la localidad alicantina de Alfaz del Pi. El crimen se pro- dujo en la vivienda familiar y el hecho de que ningn vecino escu- chara el ladrido de los perros ni se sustrajera ningn objeto de valor indicaba a la polica que el responsable era alguien cercano a la familia. La investigacin se centr desde el principio en el entor- no de la joven fallecida porque en los crmenes de sangre el autor y vctima se conocen en un altsimo porcentaje de casos.Pocos das despus, la titular del juzgado de Benidorm acord el ingreso en prisin del hermano de la vctima bajo la acusacin de homicidio y tenencia ilcita de armas. En este caso, la investi-gacin de la polica cientfica fue determinante para su deten-

Encontrar el arma homicida aporta muchas pistas a la polca cientfica. Arriba, pruebas de ADN.

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] n. 583 junio-julio 2009

Drogas en el aire

[]Qumica e Industriaqei18 n. 583 junio-julio 2009

os agentes de polica se exponen a situaciones peligrosas cuando se ocu- pan de laboratorios clandestinos pa-

Lra la fabricacin de drogas estupefacientes, que suelen albergar materiales txicos, e incluso inflamables y explosivos; y que pue- den estar emplazados en cualquier sitio. En estas circunstancias, el anlisis qumico del aire puede determinar y cuantificar la pre- sencia de una infinidad de sustancias que permanecen en suspensin.Investigadores del departamento de Qu- mica Ambiental del recin creado Instituto de Diagnstico Ambiental y Anlisis del Agua del CSIC han desarrollado el primer mto- do de anlisis especfico para la deteccin de drogas en el aire y han realizado ya nu- merosos experimentos que confirman la va- lidez del sistema, descubriendo la presen- cia de distintas drogas en el aire de Madrid y Barcelona. En la investigacin, publicada recientemente en Analitycal Chemistry, estos investigadores, junto a otros del Centro de Investigaciones Energticas, Medioambien- tales y Tecnolgicas (Ciemat) y del Institu- to Cataln para la Investigacin del Agua, han descrito un mtodo especfico que de- tecta hasta 17 compuestos pertenecientes a cinco drogas distintas.Mar Viana, una de las investigadoras prin- cipales del proyecto, destaca que podran detectarse nuevas drogas emergentes a tra- vs del anlisis de compuestos de origen desconocido detectados durante el monito- reo de las sustancias habituales. Adems, si tomamos, por ejemplo, muestras de unazona donde no haya indicio esperado de

consumo y los resultados de los anlisis in- dican niveles inesperadamente elevados de determinadas sustancias, ello permitira identificar focos imprevistos de trfico o tra- picheo, o incluso sugerir la ubicacin de un laboratorio clandestino, afirma. Con la co- bertura espacial adecuada, asegura Viana, sera posible realizar mapas de niveles de estas sustancias en el aire de una determi- nada ciudad, identificando zonas de mayor y menor consumo y trfico. De hecho, la investigadora del CSIC asegura que en el fu- turo quieren seguir ampliando el anlisis a otras zonas y lograr as un mejor monito- reo de lugares con potencial consumo.El mtodo de deteccin funciona, segn explica Mar Viana, de la siguiente manera: Captadores ubicados en estaciones de ca- lidad del aire aspiran un volumen de aire determinado durante 24 horas, el cual pasa por unos filtros de microfibras de cuarzo donde se retienen las partculas en suspen- sin. La muestra es analizada con una me- todologa que combina la cromatografa l- quida y la espectrometra de masas.De entre los 17 compuestos padre y me- tabolitos analizados en el laboratorio, co- rrespondientes a cinco clases de drogas (co- cana, anfetaminas, opiceos, cannabinoides y cido lisrgico), las cantidades detectadas en Madrid y Barcelona durante estas inves- tigaciones son muy pequeas, siendo la co- cana la de mayor presencia con diferencia. Las concentraciones detectadas van desde29 a 850 microgramos por metro cbico de aire, aunque se superan sensiblemente es-tos niveles durante los fines de semana, lo

que sugiere un incremento del consumo du- rante ese periodo. Viana advierte que los ni- veles medios no suponen ningn riesgo pa- ra la salud humana, y los ms altos, de momento, tampoco, y explica que la coca- na en el aire tiene una presencia similar a la del cadmio, un metal pesado generado por la industria y el trfico. Otro aspecto a destacar es la equivalencia entre la canti- dad de sustancias detectadas en el aire y las consumidas, ya que en el caso del aire, las emisiones que llegan a la atmsfera no son slo producto del consumo, sino tambin del trfico y la manipulacin; as que la re- lacin no es directa.Es difcil interpretar los datos obtenidos y determinar niveles de consumo a partir de estas mediciones. No obstante, los m- todos de anlisis utilizados por los cient- ficos del CSIC puede utilizarse para llevar un cierto control sobre el consumo y hacer seguimientos a largo plazo, y la infraes- tructura utilizada podra ser la de capta- cin de partculas en las redes de calidad, por lo que no necesita invertir en nuevos equipos. qei

cin, puesto que fue incriminado gracias a las pruebas de balsti- ca que detectaron plvora en las manos y en el pantaln del joven, a pesar de que se duchara y lavara tras cometer el crimen.Adems, la polica encontr el arma homicida, que se envi con celeridad a los laboratorios, una escopeta de caza de doble gati- llo propiedad del padre de la vctima, enrollada en una toalla en un barranco en las inmediaciones del lugar del crimen. El anli-sis de la plvora fue determinante. Este caso es un ejemplo en el

bono (CO2), vapor de agua (H2O), ni- trgeno (N2) y mo- nxido de carbono (CO), que propul- san la bala dentro del can. Instan- tes despus, el mo-

La cocana se detecta en el aire de Ma- drid y Barcelona.que se demuestra cmo la rapidez y eficacia de la polica cientfi- ca hizo que el crimen se resolviera en pocos das y el asesino decla- rara su culpabilidad.Y es que cuando un arma es disparada se generan gases que contienen varios componentes provenientes de los casquillos de la bala y del propulsor del arma y que quedan depositados en la ropa y las manos del autor del crimen. La plvora experimenta una reac- cin qumica que produce gases compuestos como dixido de car-

nxido de carbono y el gas hidrgeno reaccionan (ignicionan) con el oxgeno de la atmsfera, produciendo el destello en la punta de la pistola. Se genera por tanto un residuo qumico que se examina mediante un microscopio de barrido electrnico acoplado a es- pectrmetros de energa dispersiva; es un instrumento capaz de en- contrar pequeas partculas del residuo en cualquier lugar.Sin embargo, no todos los casos se resuelven con tanta rapidez;por eso es importante que cuando se acude a la escena de un cri-4

qeiclavesQumica con gancho

os medios de comunicacin de ma- sas, fundamentalmente la televi- sin, han demostrado durante los

Lltimos aos la fascinacin por las inves- tigaciones criminales a travs de series de televisin que han popularizado la ciencia forense. Es el caso de la serie norteameri- cana Crime Scene Investigation (CSI), que es un xito televisivo al que han sucumbido millones de telespectadores de todo el mundo y en el que la ciencia y la investi- gacin criminal son parte central del de- sarrollo argumental.Es precisamente este gancho el que el qumico norteamericano Matthew E. Johll ha utilizado en su libro Qumica e investiga-cin criminal: Una perspectiva de la ciencia fo-

rense, publicado por Editorial Reverte y tra- ducido al castellano por el decano del Cole- gio Oficial de Qumicos de Catalua y cate- drtico emrito de Ingeniera Qumica de la Universidad de Barcelona Jos Costa Lpez.El libro despierta desde el principio el inters del lector hacia la qumica forense y lo hace de forma magistral, invitando a profundizar de la mano de casos prcticos y reales sobre investigaciones criminales, explicando los principios bsicos de esta disciplina de forma clara y sencilla. En re- sumen, es una gran obra de divulgacin.Matthew Johll divulga la qumica bsi- ca acercando al lector hacia la considera- cin de las pruebas encontradas en la es-cena del crimen como sustancias

susceptibles de ser analizadas para deter- minar su composicin con una elevada pre- cisin, detectar molculas adheridas y de- terminar los posibles cambios que ha sufrido por las reacciones que se hayan po- dido producir desde su intervencin en el delito investigado. La obra se estructura en catorce captulos que enlazan mbitos te- mticos como la conservacin de las prue- bas incluyendo sus cambios fsicos y qu- micos; las pistas atmicas; pruebas qumicas; propiedades de las disoluciones; la qumica de las drogas; la adiccin; la qu- mica del fuego; las explosiones; bombas; venenos y el anlisis del ADN.Al final de cada captulo, incluye pro-blemas de qumica forense que propor-

4men se recojan de forma minuciosa todas las pruebas posibles, ya sea en su escenario o en lugares de registros y detenciones, para su posterior anlisis en el laboratorio, pues cualquiera de ellas pue- de ser determinante para la resolucin del caso. La toma de muestras se realiza por personal especialmente preparado para ello, los funcionarios de Inspecciones Oculares, que estn en condi- ciones de tomar con la misma soltura muestras de distinta natu- raleza y que, posteriormente, se analizan en laboratorios diferen- tes. An as, en aquellos casos en que la trascendencia, dificultad o caractersticas del hecho lo aconsejen, estos funcionarios son acompaados por los especialistas de los laboratorios mencionados de cara a llevar a cabo una toma de muestras ms prctica y efec- tiva, destaca Francisco Ramrez.Sobre la situacin de la polica espaola, el miembro de la Comi- sara General comenta que la proliferacin de series extranjeras, como CSI, e incluso nacionales en materia policial ha calado en la sociedad espaola, situacin que en sus palabras ha incidido en multiplicar el trabajo de la polica cientfica en los ltimos aos.

Jos Costa Lpez, decano del Colegio de Qumicos de Catalua, actu como perito en el caso del incendio del Liceo de Barcelona.

Sin embargo, destaca un aspecto negativo y es que les solicitan cons- tantemente resultados porque se ha visto hacer en la televisin, pero que en nuestra realidad son imposibles de obtener por la mala calidad de las muestras o porque suponen un esfuerzo in- til debido a que nuestra legislacin no es igual a la de otros pases.

Muestras para el anlisisQuizs, la muestra ms rutinaria, clsica y segura sea la recogida de huellas dactilares mediante el uso de polvo de carbn activo. stas contienen lneas caractersticas e irrepetibles de cada indi- viduo. De hecho, en su momento esta prctica revolucion el campo de la ciencia forense al tratarse de un mtodo de identifi- cacin que permite relacionar a personas con objetos, como el arma del delito o el pomo de una puerta.Adems, en las huellas dactilares se encuentran compuestos que pueden variar de un individuo a otro. Normalmente iones inor- gnicos (originados por la prdida de electrlitos a travs de las glndulas sudorparas), cidos orgnicos (aminocidos, cido ac- tico y lctico), agua (sudor) y lpidos (aceites, grasas y ceras). El ras- tro de las huellas se produce cuando las manos y dedos entran en contacto con cualquier superficie o material, provocando que se adhieran los compuestos en la superficie.Tradicionalmente tambin se recogen muestras de vidrios y sue- lo para medir sus propiedades fsicas, especialmente su densi- dad. Es el caso de las huellas de las pisadas encontradas en la escena del crimen, para luego compararlas con las obtenidas de algn sospechoso. Mediante un procedimiento electroesttico se obtiene la muestra final que permite levantar las huellas de cual- quier superficie, incluyendo tambin las de los suelos porosos.Pero no son las nicas pruebas que se encuentran en el suelo, que suele contener una gran variedad de compuestos, como mine- rales, polvo, materiales orgnicos, polen, arcillas o pequeos gui- jarros. Su presencia se analiza como una mezcla nica que slo se encuentra en la zona de la escena del delito. Una vez conside- rado esto, si se recoge del sospechoso tierra que coincide con la prueba, se puede sopesar que se ha establecido una pista. No obs-

cionan al lector la posibilidad de aplicar los conceptos adquiridos a los problemas de una investigacin criminal. Los casos en estudio tratan de otros delitos y situacio- nes relacionados con el contenido del ca- ptulo y muestran a los estudiantes, o al lector, cmo investigar conceptos qumi- cos que se presentan en casos legales. Es muy recomendable para estudiantes de ba- chillerato y de primero de carrera, pero tambin para todos aquellos que sin mu- chos conocimientos de qumica, tengan in- ters por conocer esta materia de una for- ma muy amena y gil.El autor de la traduccin, Jos Costa L- pez, explica que una de las motivaciones que le llevaron a interesarse por este libro, uno de los pocos que existen en castella- no en esta materia, fue su gran xito enEstados Unidos y, por tanto, el xito casi

seguro en el mundo de habla hispana, as como la difusin de una salida profesional diferente de los qumicos. Durante su di- latada carrera como perito en los tribuna- les de justicia, Costa Lpez ha trabajado intensamente en qumica forense para la polica en incendios, explosiones, envene- namientos y contaminacin ambiental, en- tre otros.Pero tambin le ha motivado, afirma el decano de los qumicos catalanes, el he- cho de que uno de los fines del Colegio de Qumicos sea facilitar la divulgacin de la qumica, que sigue siendo la gran desco- nocida de la sociedad.El profesor ha destacado que el libro cu- bre un amplio espectro de posibilidades: se puede utilizar como libro de texto en Ba- chillerato o en primero de carreras uni-versitarias tales como las tpicas de cien-

cias Qumica, Fsica, Biologa, Geologa, pero tambin en reas jurdicas o espec- ficamente de criminologa. Podra servir asimismo para preparar oposiciones, co- mo las de profesor de Bachillerato, polica cientfica, y personal del Instituto Nacio- nal de Toxicologa. qei

to, afirm en abril durante un encuen- tro sobre justicia penal y desarrollo tecnolgico, que el sistema de identifi- cacin por huellas dactilares es la for-

El libro ahonda en casos prcticos.

Bsqueda de huellas dactilares.

tante, cabe recordar que este hecho no demuestra la culpabilidad del sospechoso, tan slo que la persona estuvo presente en aquel lugar, por lo que se necesitaran ms pruebas incriminatorias adi- cionales.Mediante el uso de la qumica tambin se pueden restaurar los nmeros de serie de instrumentos que hayan sido previamente borrados, como los de un arma de fuego, e identificar documen- tos falsos y su alteracin, e incluso detectar manchas de sangre.Los criminales intentan entorpecer a la polica en la identifi- cacin de las vctimas con mtodos como la desfiguracin de las caras, manos y dedos con cidos corrosivos. Pero en estos casos no cuentan con el desarrollo de la gentica. El ADN se ha conver- tido en un aliado de la investigacin policial, ya que las muestras fsicas, como piel, sudor, pelos, sangre y saliva pueden ofrecer toda la informacin necesaria para la identificacin de un sospe- choso, o de una vctima en este caso. El valor forense del ADN radi- ca en el hecho de que es nico para cada individuo y en la facili- dad con que se obtienen sus muestras. No obstante, el inspector jefe de la Polica Cientfica del Ministerio del Interior, Ral Cue-

ma ms fcil, fiable y econmica, recomendando las pruebas de ADN slo si es estrictamente necesario porque tarda ms y cuesta bastante dinero por muestra.Las muestras recogidas en el lugar de los hechos se clasifican y envan, en el caso de las qumicas, al Laboratorio Qumico de Madrid de la Comisara General, mientras que las pruebas biol- gicas de ADN se remiten al laboratorio ms cercano. Actualmen- te, la Polica Nacional cuenta con estos laboratorios, adems de en la capital, en Sevilla, Barcelona, Valencia y La Corua.Como en todos los campos, el avance de la ciencia y la tec- nologa se traslada rpidamente a la investigacin policial y jur- dica. El Servicio de Informacin de Noticias Cientficas (SINC) del Ministerio de Ciencia e Innovacin, informaba reciente- mente de que el FBI est invirtiendo millones de dlares en la cre- acin de la base de datos biomtrica ms extensa del mundo, den- tro del proyecto Identificacin de Prxima Generacin (Next Generation Identification). Su objetivo es mejorar la identifica- cin de personas a travs de sus rostros, palmas de la mano y hue- llas dactilares.Carlos Olvera, del Servicio de Criminalstica de la Guardia Civil, afirmaba en la noticia del SINC que en Espaa, cuando la autori- dad judicial lo requiere, se realizan estudios antropomtricos, para determinar, por ejemplo, si ha habido cambios en el rostro de una persona sospechosa a lo largo del tiempo. La sorprenden- te evolucin de la informtica en los ltimos aos ha incidido en la creacin de importantes bases de datos que ayudan a la poli- ca. Es el caso del programa de elaboracin de retratos robotFACET, que permite recrear la cara de un sospechoso partiendo 4

qeiclaves

[]n. 583 junio-julio 200921qei Qumica e IndustriaTras un incendio los especialistas buscan pruebas.

Microscopio electrnico de barrido.

4de sus ojos, nariz y boca. Aunque lo ms comn sigue siendo tra- bajar con las tcnicas relacionadas con las huellas dactilares, denominada SAID, y de balstica, SAIB.

Lo que el fuego escondeLos casos que con ms frecuencia se investigan en la ciencia foren- se son los incendios y las explosiones, escenarios desgraciada- mente habituales. Una vez ms, la eficacia de la investigacin para determinar el origen de las llamas se basa en un slido cono- cimiento de la qumica y la fsica.El denominado tringulo de fuego los tres elementos bsicos para que se origine son combustible, calor y comburente (nor- malmente oxgeno). La investigacin de las causas de un incen- dio recae en la determinacin de si fue intencionado o fortuito. Con este claro objetivo, los agentes de polica tienen en cuenta la pre- sencia o ausencia de los materiales fundidos, testigos con valiosa informacin, como los vidrios de las bombillas elctricas (ablan- dados por el calor), metales, latas de aluminio, plsticos y cables de cobre, entre otros, y que son algunas de las pistas que pueden localizarse sobre el terreno. La informacin es tan pormenoriza- da y fina que incluso permite determinar la temperatura alcanzada por el fuego.Las evidencias para concluir si un incendio fue provocado o no son difciles de encontrar, porque generalmente tras el fuego las zonas quedan cubiertas por escombros. Si fue intencionado, nor- malmente se acelera la combustin con sustancias que la croma- tografa de gases y la espectrometra de masas, dos tcnicas habi- tuales en los laboratorios de qumica, pueden identificar. En su bsqueda de evidencias para aclarar lo sucedido y facilitar la admi- nistracin de justicia, el investigador trata de encontrar los resi-

duos de los lquidos de ignicin o acelerantes en las muestras de los escombros: gasolinas, disolventes, queroseno y otros lquidos muy inflamables y fciles de conseguir que suelen utilizarse en este tipo de delitos para conseguir que la propagacin del fuego sea ms rpida y dificulte su extincin.Casos como el espectacular incendio del rascacielos Windsor, que fue devorado por las llamas el 12 de febrero de 2005 mientras Madrid dorma, an siguen dando que hablar. O el incendio del Gran Teatro Liceo de Barcelona, en 1994, cuyo juicio tuvo lugar en el ao 2000, y que dej en evidencia el sistema de seguridad con- tra incendios; finalmente se lleg a la conclusin de que el origen del siniestro fue una chispa procedente de las soldaduras que se realizaban en el escenario.Cabe destacar que este caso provoc un gran impacto y alar- ma social, calando as en la opinin pblica. Los informes previos de la polica y bomberos durante la instruccin judicial motiva- ron la acusacin pblica del ministerio fiscal y la acusacin pri- vada por la va penal, aunque, finalmente, los acusados quedaron absueltos.Jos Costa Lpez, decano del Colegio Oficial de Qumicos de Cata- lua, catedrtico emrito de Ingeniera Qumica de la Universidad de Barcelona y uno de los peritos participantes en el caso penal con- tratado por la defensa, opina que para la resolucin de estos casos ayuda enormemente plantearse las preguntas especficas que debe intentar responder el experto forense, y que son normal- mente: cmo ha ocurrido? y por qu? Responder a esas cuestio- nes suele ayudar a contestar las que se plantea la polica, como qu ha ocurrido, cundo, dnde y, si es posible, quin ha sido.El perito judicial respondi a estas preguntas en su informe, en el que afirm que no se encontraron pruebas de incendio provo-

La acreditacin de la ENAC, imprescindible para los laboratorios de anlisis de ADN para uso forense

a Entidad Nacional de Acreditacin (ENAC) es el organismo dependien- te de la Administracin encargado

Lde establecer y mantener el sistema de acreditacin a nivel nacional. En Espaa, el Real Decreto 1977/2008 que regula la composicin y funciones de la Comisin Nacional para el uso forense del ADN esta- blece que los laboratorios que realicen anlisis de ADN y aporten perfiles genti- cos a la base de datos policial debern estar acreditados por la ENAC. Los labo- ratorios forenses juegan un papel rele- vante en la investigacin de delitos pues aportan informacin sobre las evidencias obtenidas en el lugar del crimen para su utilizacin en el proceso judicial. Esta infor- macin ser, en muchos casos, determi-nante para el resultado final del proceso.

Por esta razn a estos laboratorios se les exige la mxima credibilidad y fiabilidad en los resultados y desde hace unos aos se les reclama su acreditacin como una herramienta imprescindible para asegurar su competencia. Por ello, la Red Europea de Estudios de Ciencias Forenses (ENFSI), que engloba a todas las organizaciones que trabajan en esta especialidad, aprob en 2002 un compromiso en el que se esta- bleca como requisito que todos estos labo- ratorios, miembros de la ENFSI, dispusie- ran de la acreditacin ISO 17025, otorgada por el correspondiente organismo nacio- nal de acreditacin. En Espaa ese papel lo lleva a cabo la ENAC. Las primeras acre- ditaciones se concedieron en el ao 2000 al Instituto Nacional de Toxicologa y al Laboratorio Normativo de Salud Pblica

de Bilbao. A partir de entonces se fueron incorporando otros laboratorios, como el Servicio de Criminalstica de la Guardia Civil para el anlisis y comparacin de perfiles de ADN, en 2003. El pasado sep- tiembre se concedi la primera acredita- cin (la segunda en Europa de este tipo) para el estudio y comparacin de huellas dactilares a la Unidad de la Polica Cient- fica de la Ertzaintza. El director de esta unidad, Jon Uriarte, ha afirmado que con esta acreditacin se garantiza que el labo- ratorio es tcnicamente competente y capaz de generar resultados tcnicamen- te vlidos. Con ello, el prestigio y la ima- gen del laboratorio experimentan un nota- ble incremento tanto para los clientes (servicios policiales y/o judiciales) como para la propia sociedad. qei

cado, pero que su propagacin se debi a la presencia de mucho material combustible. Tras analizar lo sucedido, en la recons- truccin del Liceo se utilizaron materiales mucho ms seguros. En este caso la ciencia forense contribuy a dificultar que este tipo de accidentes vuelvan a ocurrir.Los mtodos experimentales relacionados con las caractersti- cas de ignicin de los combustibles presentan una doble vertien- te. Por un lado, contribuyen a un mejor conocimiento de los pro- cesos y fenmenos implicados en el fuego, aclarando cuestiones relacionadas con los mecanismos y cintica de las reacciones qu- micas en cadena. Por otro lado, y como hemos visto, tienen un inte- rs tcnico vinculado a la seguridad.Jos Costa destaca el papel de la polica cientfica en los incen- dios, que tras revisar el informe de los bomberos, las declaracio- nes de los testigos y otros factores investiga las causas y emite un informe pericial al juez que se encargue inicialmente del caso. Ade- ms, relata que, posteriormente y si la fiscala o la posible acusa- cin particular consideran que puede haber delito, empezar a constituirse la correspondiente causa judicial y aparecern ms informes periciales de las partes, acusacin y defensa, realizados por expertos contratados al efecto o por algn perito judicial desig- nado por el juez a peticin o no de las partes.El Informe Pericial Tcnico Policial, donde la polica cientfica notifica a la autoridad judicial competente los resultados de sus estudios, va firmado por dos especialistas y es evaluado en la fase de juicio oral. Francisco Ramrez, jefe de Seccin de la Polica Cientfica en Madrid, afirma que estos informes periciales, nor- malmente, no son contrastados con contrapericias, aunque des- taca que en el caso de los laboratorios qumicos siempre se bus- ca la contrastacin de los resultados cientficos por medio de

varias tcnicas de principio fsico-qumico diferente y, aade, si todas ellas apuntan en la misma direccin, la conclusin es casi irrefutable. No obstante, las conclusiones adems son exami- nadas siempre por un segundo especialista que se cuestiona su vali- dez antes de firmar el informe, por lo que, concluye, estos son mecanismos de aseguramiento de la calidad del estudio.

La polica cientfica en EspaaTodo lo descrito hasta ahora forma parte de la actividad profesional de la polica cientfica en Espaa. A lo largo de la historia, estos pro- fesionales han ido incorporado todos los medios a su alcance para mejorar la investigacin policial forense. De hecho, en 1911 comen- z a funcionar en la Jefatura Superior de Polica de Madrid el Ser- vicio de Identificacin Dactiloscpica, considerado el primer ante- cedente moderno de lo que actualmente se conoce como polica cientfica. Sin embargo, tuvieron que pasar ms de ocho dcadas hasta que en 1994 se creara la Comisara General de la Polica Cientfica, una de las cinco comisaras generales del Ministerio del Interior.Esta unidad cuenta en la actualidad con diez especialidades tc- nicas: huellas dactilares, antropologa forense, estudios de false- dad documental, pericia informtica, balstica forense, acstica forense, inspeccin ocular tcnico policial, tecnologa de la ima- gen, ADN, y qumica y toxicologa.La creacin de las Unidades de Polica Cientfica (UPC) en la Polica Nacional en los aos ochenta del pasado siglo supuso la estandarizacin de los mtodos utilizados en este tipo de inves- tigaciones, con la definitiva incorporacin de los avances de la cien- cia y la tcnica a las actuaciones policiales. Repartidas por todo elterritorio espaol, estas unidades acogen en total a unos 2.000 agen- 4

qeiclaves

[]Qumica e Industriaqei22 n. 583 junio-julio 20094tes que trabajan en diferentes especialidades tcnicas y territorios, y que son coordinados por la Comisara General de Polica Cien- tfica en Madrid. Precisamente, el jefe de la Seccin de Unidad de Anlisis de la Polica Cientfica de esta comisara, Francisco Ram- rez, recuerda que antes de que existieran las UPC el estudio de pruebas y evidencias era mnimo o inexistente, y todo se circuns- criba al interrogatorio de testigos, vctimas y sospechosos.Las UPC nacieron con la funcin de estudiar, investigar y desa- rrollar tcnicas que respaldaran la investigacin policial del deli- to y la identificacin de los delincuentes; es decir, para aplicar la racionalidad de la ciencia a la investigacin policial mediante una visin multidisciplinar, donde la qumica, como ya se ha puesto de manifiesto, tiene un importante papel.Fruto de la importancia de estas unidades de la polica es la inau- guracin hace tan slo unos meses por parte del presidente del Gobierno, Jos Luis Rodrguez Zapatero, y del ministro del Inte- rior, Alfredo Prez Rubalcaba, de las nuevas instalaciones para la Comisara General de la Polica Cientfica, situadas en el comple- jo de Canillas (Madrid) y consideradas de las ms modernas de

Estudio de las huellas dactilares.

Europa. En total, casi 23.000 metros cuadrados en los que se han incorporado los ltimos avances tcnicos y cientficos en labora- torios qumicos, de balstica forense, ADN, entomologa, antro- pologa e informtica, lo que la convierte en la ms grande insta- lacin policial de Europa. El coste de esta dotacin ha sido de veinte millones de euros.El departamento de Qumica, perteneciente a la Seccin de Criminalstica Analtica, desarrolla una amplia gama de tcnicas integradas en reas concretas, agrupadas en funcin de los an- lisis. Destacan los qumicos, como los de microtrazas en pinturas, fibras, vidrios y tierras, pero tambin los relacionados con incen- dios, explosiones y residuos de disparos. Adems, a travs de un laboratorio de Medio Ambiente, en el que se detecta la posible con- taminacin de aguas, suelo y aire, este departamento tiene una vin- culacin con el Servicio de Proteccin a la Naturaleza (Seprona) de la Guardia Civil.Para las pruebas de identificacin humana a travs del ADN, la polica cuenta con un Departamento de Biologa, donde las

muestras y pruebas recogidas en la escena del crimen sirven para extraer el ADN mitocondrial y nuclear y que se incorpora a la base de datos ADNIC (ADN de Inters Criminal) para poste- riores cotejos.Otros departamentos destacados, en los que las nuevas tec- nologas desarrollan una importante labor son los de Acstica e Imagen que pretende dar respuesta a la demanda judicial sobre la validacin de las pruebas contenidas en formatos audiovisua- les y el de Electrnica e Informtica, de ms reciente creacin. Este ltimo lleva a cabo labores como analizar telfonos mviles, recuperacin de datos, lucha contra la piratera informtica y estafas, y el estudio de delitos cometidos a travs de Internet.

Qumica forense como salida profesionalEn Espaa, la qumica forense es an una especialidad incipiente exclusivamente encomendada a los Cuerpos y Fuerzas de Seguridad del Estado y al servicio mdico legal, pero se est abriendo paso en las universidades, aunque lentamente si nos comparamos con otros pases. Universidades de Estados Unidos, Canad, Reino Unido, Alemania, Suiza, Polonia y Australia impar-ten diferentes ciclos formativos que ofrecen una titulacin, normalmente de segundo ciclo, de experto en ciencia e ingeniera foren- ses. Sin embargo, la situacin de nuestro pas es que no hay estudios universitarios estruc- turados, aunque s alguna asignatura suelta en varias titulaciones como Criminologa. Quiz con la adaptacin del Espacio Europeo de Educacin Superior, el conocido como proceso de Bolonia, las universidades espa- olas puedan aprovechar la posibilidad de ofertar estas enseanzas a sus alumnos. Ms all de las propias actividades docentes, lo ideal sera que los qumicos pudieran inves- tigar en ciencias forenses en los propios departamentos universitarios.Por otro lado, hoy por hoy, para formar parte de la polica cientfica es necesario aprobar una oposicin y, una vez dentro, formarse hasta poder incorporarse a las unidades.Otro mbito profesional de inters para los titulados en qumica o ingeniera qumica es el de actuar como peritos ante los tribu- nales de justicia. En el mundo existen en el mbito institucional diferentes asociaciones cientficas y tecnolgicas orientadas a la defensa de los intereses de los expertos forenses como la Acade- mia Nacional de Ingenieros Forenses en Estados Unidos. En Espa- a, este papel lo ejercen los colegios profesionales, que envan todos los aos a los juzgados un listado de colegiados dispuestos a inter- venir en litigios forenses.En definitiva, se puede afirmar que la ciencia forense abre vas profesionales a tener en cuenta por los titulados en qumica por- que existe un mercado creciente que demanda este perfil. Inclu- so la Reforma Procesal Penal hace referencia a la formacin de la polica cientfica especializada y a la contribucin de las institu- ciones forenses para la rpida interpretacin de las evidencias, capaces de crear nuevas tcnicas analticas ajustadas a nuestra sin- gularidad y de formar a profesionales dedicados a la investigacin criminal. qei