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MEMORIA

DE LA VIDA POLÍTICA Y RC.LJL'-Y.L'ur~,_

DE LOS JESUITAS~

DONDE: SE PRUEBA

QUE NO ,aAN DElUDO

v O L V E·R A E S P A Ñ A

PQR SER peRJUDICIALES

A LA RELIGION Y AL ESTADOJ

escrita en obsequio de Dios del Rey y J~ Pátria, por D. A. Zeper Ga~()araz~

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MADRlD: IMPRENT4 DE ALVA~E~ J8

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,,¡ INTRODd,cCIO~, - \

Nadie ignora cuan\iirano es el b perio de la preocupacion, particula mente aquella que se apodera de nue tra razon con el auxilio de la enseña ia; pues domina al entendimiento avasalla la voluntad con pretes'tos ap rentes de religion; y de estos medi se valieron siempre los Jesuitas pal fortalecer el despotismo injusto ji p ¡igroso de su sociedad. Su opulenc su orgullo, su mala doctrina, su humi dad aparente, su rencor, sus 'ideas CÍJ

máticas, su lisonja, su embidia, J

hipocresía, su' maledicencia, .Y en fi el ódio general que se grangearon , todas las comunidades religiosas y obi. pos por sus injustas usurpaciones JI eJ

. I candalosas competencias, fueron cau~ de su expulsion de los dominios de EJ paña; 'JI habiendo vuelto tí nuestro SUf

4 , cr,;n admÍracion de los qrt~ C()t1oe~1i

'1 historia de Su reinado, y l(js perjui­

¡os que de su restauracion deben u­uirse al Estado y ti la Iglesia, es rflliy

onducente publicar sus máximas JI los ¡ajes que ocasionaron al mundo para llC nadie 10i ignl)re: En el momento 'e ,decretarse S1l restauracion hubiéra­lOS dado á la pretua estas noticias, 'erad temor de ser víctimas acaso de

n fanatismo despótico, nos contuvo de

acer este importante s~rvicio al Rey, la Religion y al Estado. Mas en el

ia en que la libertad de imprenta per­lite á todo ciudadano el comunicar uanto pueda ser ztti{. ó perjudicial R ti Pátria., seríamos criminales en sus­'ender por l1UlS tiempo estas refle:cio­

es; fundadas en documentos irrefra­~ables, particularmente cuando vemos lue el gobierno, en el tiempo que lleva lajo el sistema constitucional, no ha

ocado este p~mto de reforma tan útil

..... .

G~Ií1(Jnecesarla tÍ la Religion,y al E

tado ;y suponiendo qfte el Congreso n donal tratará de discutir .Y resolv materia t'an importante, no serIa il ()portuuo, para que el Pueblo, si llegt se el caso de una segunda supresio no lo atribuía en perjuicio de la R~ ligion Católica, fascinado por bo" bres enemigos de! nuevo sistema, el pre sentarle al natural el carácter J' má ximas de los PP. de la Compailfa (j

Jesus, para que se penetre de las cau 3as de su primera expulsir)J1 en toda las naciones,'y que las circunstancia In que se baIla la nuestra exigen se a. flu/e el decreto de su restab/ecimient.

.Y reintegro de sus prerrogativas JI pro: piedades, sin que esto se oponga á ¡t; /Jospitalidad que el Gobierno tuvier.f por conveniente acordar á los pocos an.i cianos que hubiere para que puedan C¿.l

fflodamenfe acabar sus diar. ;

, ,

'Es posible que los Padres de ia Comp ñía titulada de Jesushayan yuelto'á E paña despue~ de cincu.enta y tres añ06 q hace se hallan'expulsos de ella POl" ca sas tan justa~ y tan graves ~ ¿ Han sido d ,cla rados inocentes .de tantos crímenes atentados cometido .• por todo el niunc y contra toda cIase :de hombres',s;n resp tar condicion, rel igion ni estado ? ¿P ventura estabamos'escasos de :reli,gios para atropellar por todo y l1a'marlos? Dejémonos de preguntas yreflexio:ne, pues nada debe extrañarse en sabiendo ft dispuesto por elgobíerno de los seís año Pero seános per,niitidodecir ; que poe enterado, Ó muy;~rascordado'debióe~li de la historia J.:süHicael Ministro q\: sorprendió al Re')':, abusandocruelmel~r de su bondad y,Re:d confianza, para a/ rancarJe una res0(ucion 'tan per1'udici' ". . I al Estado, hacien:do~ tan poco honor á lr ce-niz.as del Rey ',Carlos- nI, su auguí) abuelo, y á léi santidad del Papa Cl~; mente XIV. qüe ,extingió en todo el or}.

\ .,

"'3

: ~ristiano la Compañía de Jesus! Y pár~ l que núestros lectores (esto es los que ig­: '1oren 10 que otros tienen ya olvidado) no

?lo s.e cercioren, si no que vean á qut¿ !empos de estupidez habiamos llegado , . . , e aqUl parte .del breve del santo .Padre :Iemente XIV. por d cual deroga y .ex­ngue el instituto y órdell de los Clérigos ~gulares deno,mini,ldos .de 1<). Compafiía .e Jesus.

(rp . & ara pe~petua memona . c. &c." San Pio V. predecesor nuestro, cuya

" lsign~ santida.d, reverencia y venera en I 's altares la Iglesia Católica; extinguió · abolió ~nteramente laórden regular de · s humillados, que habia sido fundada · ltes del Concilio Lateranense, y apro­, Lda por Ino~ncio III. HonorÍo III. Gre­¡ Irio IX. y Nicolao V. Pontífices Ro-

anos predecesores .nuestros, de feliz; I . . b d emona, pDr l:no e ¡encía á los decretos / 'osróJicos, por las discordias doméstiqs '. exterI)as que suscitaron, por que no da.,. , esta órdell absplutam~nte rnu-estras nin ... r :nas de virtud, y por que algunos in ... , viduos de ella intentaron malvadamen­, dar la muerte á s.an C;irlos Borromeo: , Papa Urbano VIII. suprimió la Con-

\

9 ~regacion de los conve1.~t:t~ies reformados por las disensiones que OrlgIDaron~. Ino­cencio X .en 1645 suprimió la orden de pobres de la Madre de Dios, por com­peteHcias y disensiones, y úhimamente. .otros varios de nuestros predecesores han/ derogado diferentes institutos pernici~sosi á la Iglesia &C. Teniendo pues á la VIsta!;. estos y otros ejempla.res, y deseando pro~' ceder con acierto y s~guridad á la .deter..J¡ minaciort que adelante man'¡f~sta~en:~s;: no hemos omitido ningun trabajO m d.tlH gencia para la exacta averiguacion de to~ do lo perteneciente al orígen, progreso'. y estado actual de la Orden de los Regu .. J

lares, ~olDunmente llamada la Compa-', ñía de Jesus, y hemos encontrado que, esta fue instituida por su Santo funda J¡

dor para la salvacioIl de las almas, con ... '; version de hereges, y para aumento de l.a:; piedad y r.eligion; y que para co~segl1!~! mejor este fin f\.le consagraGla á DIOS \Con' el estrechísimo voto de la pobreza evan .. , gélica, tanto encomun como en particu .... · lar: pero por el mismo contexto y pala .. ' bras de las Constitucionesapost6licas se, hecha de y~r c;laramente que en la dicha. Compañia desde su origen empezaron ti;:

I tO brotar varia!; semillas de di<;ensiones JI contenciones con otras Ordenes de Regu­lares, él Clero secular, Univenidades, Escuelas publicas, Cuerpos literarios, y aUIl hast:t con los mí"mo.; soberano" en !;:uyos dominios había sido admitida la ICompañía: y que dichas contiendas se l ius~ítaron sobre la ca \ ídad y natura \eza .:le 105 votos, tiempo necesario para su I profesion, y otras cosa~ qu'~ tienen contra í lo mandado por el Concilio de Trento, y 'd Papa Pio V., é igualmente sobre pun­I ~osde doctrina, exencione" privilegio", y ~erechos &c. Fueron acusados lo~ indivi­

'luos de la Compañía en materias muy rrave5, que perturvaron mucho la paz y

i :ranquilidad de 1 a cristiandad. Se han da­l ~o quejas contra la Com pañía apoyadas ~on la autoridad á algunos sober,anos, y l' . ~ueron ya antes expuestas .á Paul0 IV.

~ ?io V. Y Sixto V. conclam~res de lo~ in­.¡ luisídores contra los inmoderados privile­J ;íos, forma de gobierno, y disenSiones

}ue ocasionaba didla Compañia. Todo el nundo se llenó de refíidasdisputas 50-

':')re SU doctrina repugnante á la fé cató­'. ica y á las buenas .costumbres: Se encen­

lian mas y mas las disensiones dOl11ésti~

tí ,tas y externas, y se multiplicaron las acusaciones por la ,inmoderada codicia de los bienes temporales que causaron di­chos Jesuitas; gran sentimiento é inquie­tud á la Silla Apostólica &c. Hemos ob­servado que nin~un remedio de cuantos se hanaplicado, ha producido efecto para des~rraigar y disipar tan graves excesos: habiendo sido tambien infrUctuosos los es"; fuerzos hechos por nU,estros predecesorel Urbano yUI •. Clemente IX., X, XI, yi XII. AleJandro VII. y VIII. Inocencio X.; XL,. X!I.,y XIII, .y Benedicto XIV. para' restltlllr a la IgleSia su tan deseada tran-' quilidad, mandando por sus .saludables constituciones que se abstuviaa la COI11-;

pafiía del manejo de negocios seculare< y . en las .contiendas suscitadas por elli ll1ISma ~ontra las demas Ord.enes Regu:a.~ res, ObIspos, lugares pios, y .todo génerc de cuerpos en Europa, Asia, y América.: con 1.0 que ocasionaba ,dicha' Compañí} la ruma de las almas y admiracion de: mundo; particularmente con la ínter-'I ~retacion de los ritos' gentílicos que prac.i~ tl,c~ban con frecuep,cia, no usando los qUf)¡' est~r,l. apr?bados y. est~blecidos por Jé;~' IgIl;:sla Universal, III deJando de usar lot

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il]lll!e ita Sillh Apostólica con razon ha con. CCI:Jlalailll:p.ar- esca:naal'oso' y manifiestamen­te C$l!lltronlroo: á la buena moral; y nmdl'11en­te :wblte otras, cosas de suma importancia ,. lIlIe'OeSanriia.s. para conserva r ilesa la pu­!'en de- 105, doglTlas cristianos que tanto b.nn. s,1;¡;f1l'Jdo. asi en este como en el siglo p.~td!,:}" ürrgi'nándose tantos males~, cua­~f5¡ ~l!D." ]a:s turbaciones y tumultos en los

ttp;;¡¡m CJ;t!.@ÜCBS;' persecuciones de la Igle­~I;ia cm ki;at y Europa, obligando esto á ~nl!lllf'.'5,1trn predecesor Inocencio XI. para \plroll:nülh>ñlr qcre la Compañía recibiese n~-

~~'iiciioo; &e:. Despues de tantas y tan terrt­lMes; bnlr-r'a;scas; y tempestades" ~odos, lQs

p,tmewO$ es.peraban que al ñn amaneceria el ~:¡¡ii~ dese-ad<i" en que enteramente se afian­

%;a';1t h ttL"a!n<pIit:idad y la paz. Pero regen~ ':aun¡¡J[® llat rcatedra de San Pedro el Papa

tJ:ni\!lIl!1i¿'Jillte- XIII. ~ p-rcdecesor nuestro, so-~1JlnewiilID'l~rom: ücn;] pos f1mcho mas e r Ítrcos lh ItnmrIlrL'lillerrtos; pues. habiendo crecido cada I"Hlia 1l1!U<>; Ros; cI~mores y quejas, contra la

aÜIClbJa OmlJ:J!'lIíiéa:,. y suscirádo~e en al'gu­t Jlj)):j pJl.lI:<JIgP sediciQt1es, tlHpuftos, discor­Z¡iü~<¡; y e.sdnd.al'os. que quebrantando y (,'Oillrnwiem¿¡¡@ Ctlteramente el "ínculo de la p,~i[ii~d clTiistiiarraj; encendieron en loS á:nt~

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IJ tnos de los fieles grandes en:emü<S!t.1.des, par\:ialidades y ódios, Hegú :eil ,¡J¡~['.iIlea á ta 1 ~xtremo, q LIe .aq lIe llD:': Trnis:¡d:l@'i; pdun­cipesJ cuya. innata pi-:-aad y Uui!xr;:¡¡JlJi:dla.d para -con la Compañía k" viene üOilUl~¡P01C' herencia de sus antepasados~ ¡¡¡¡ili!:! :ron¡ i saber: nuestros muy amad,osen Cifii~lt({j) lbUi~ jos los reyes de F~'ancia, de Espw", d¡¡: Portugal, y de las dos Sicilias; ,'ge ibJ,;m¡. visto precisados á hacers.alir y ce;xpeBrell:¡' <le sus reinos y dominios .á k)¡¡ in:dliiwiiuJIll.l!M, de la Comp.aííía, considerando :q¡c¡¡¡: ~$lte; era el único remedio .que queJaba. pilllI'''' ocurrir .1 tantos males, y totalmeme lllIe-: cesarío para impedir que los pueb[~ <Cll'is," lÍanos no se desaviniesen, malu··.ab'Sietm1) y: despedazasen entre sí en el 'S'e:lll'O !lIDlÜsmoo, ,de la Santa Madre Iglesia; Teniendo pm:'1 cierto los sobre dichos ml:Jy anu2dm ea: Cristo, hijos nUf.stros, que este i1el!lIDediiQ: 110 era segu ro aj suficiente para Ir!'ealrr.n,..; dlJGlf á todo el orbe cristiano, 'Sin Da. ceu.n-: tera supresion y elitincion de h diidli3'1

Compañia, espusie,l'on sus intenáolllcs J;l deseos al sobredicho Papa Clemellte :iH1.,i nuestro predecesor, y ,con el ,peso de su"

'd d '1' " -te ~utorr <, y sup leas pasar,ou Just:3l!!ll,'I!;m!te~(

ll:llfor;nef> oficios pidi;';lJqo lOma$l: a~ ~"'i~

1

1 I 14 bia· resoludon que ped ian e 1 sosiego es ... · table de sus subditos, y el bien universal de la iglesia de Cristo: pero el ?o es­perado fallecimiento del mencIOnado Pontífice, impidio su curso y éxito: por lo cual, luego que por la miser~cordia, de Dios fuimos exaltados á la mIsma cate-

. dra de san Pedro, se nos hicieronigua­'~tjes sLÍplicas y oficios, acompañados de los 'lPdict;¡menes de muchos Obispos, y otros ~ivaronesmlly distinguidos por su ,digni­,Ddad, virtud, y doctrina que haclan la Pmisma solicitud: para tomar la mas acer­j,itada resolucion quisimos indagar qué fun­'h'damento tiene la opinion divulgada e~t~'e ~mucbísimos de que la órden de los c1crJ­.:nigos de la Comp~ñia de Jesus fue aprobada 1Apor el Concilio de Trento, be~os hallado ;que no se trató de ella en el cItado Con-

p.;~ci I io sino para exceptuarla del decreto ge­~:"neral. Despues de habernos valido de tan­¡9't05 medios, y hallándonos estrechamente [~recisados á conciliar, fomentar y afirmar

J[hasta donde alcancen' nuestras fuerz,as,. el j~osiego y tranquiliJad de la republ¡q, Jibistiana; y remOVer quanto pueda can."" ,'ísarla detrimento: considerando .que dl­ijJcha Com,J?afiia. de Jesus no podia ya pl'()1

; ,

1

I) ducir los grandes frutos y utilidades para qu,,: fue in'ltituida, y enrri(iuecida con tantos privilegios, y movido dl! otra, caU'ias que nos dietal] las leyes dé la ro: ¡: gion y la pru­dencia, como el m~jor gobierno de la igle­sia Universal, con el mayor acuerdo, de cierta ciencia y con la pknitud de la po­testad apostólÍ-:a. "supri1niillos y extingui­mos dicha COlDplñia de ,Je . .;us, abolimos¡. y anulamos tod0S y cada uno de sus ofi-;¡ cios, millisterio.' y empleos, casas, eSL:ue-,

las, colegios, h:Jspicios, granjas, y qua-; lesquiera posesione; sitas en q'lales'lui..:ra¡ provincia, reyno ó dJminio y que de eua-: Jesquiera modo pertenezcan á ella; y sus. estatutos, usos y costumbres, decretos con s·, tituciones, aunque estén corroborados con, juramento, confirmacion apostólica, ó de'" otro cUidesc¡uiera modo; yasÍmismo to-: dos y cada uno de los privilegios, é in,'

. I dultos generales y especiales &c. Y por¡ tanto declaramos que quede perpetua_, mente abolida y enteramente extinguida; toda la autoridad. que tenía el Prepósito¡' General, Provinciales, Visitadores y to-/ dos los ~uperiores ,d~ dicha Compañia de;;" Jesus a51 en lo esplrltual como en lo tem~~( poral, trasfiriendo total :y enteramentels.

r6 dicha jurisdiccion y autoridad en los or ... dinarios bocales; prohibiendo corno pro­hibimos por las presentes, que se recib~ en adelante á ninguno en dicha Com pa­ñia, que se cele de el hábito, ó admira. al noviciado, ni á la' profesion de lo~ vo­tos simples ó solemnes, sopena de nulidad de la admision y profesion, y otras á ¡nuestro arbitrio: antes bien, queremos, ordenamos y mandamos que los actuales lOvicios sean inmediatamente despedidos; ~ igualmente prohibimos que los pr?feso~ iR órden saCl'O puedan ser promovIdos a

prdenes mayores contra los decretos del Concilio de Trento. Declaramos tambien ~ue todos los indivi.duos d~ la Compañ~a de qualesquiera paises estan comprendi~ ~Oii en esta extinccion general,. y quedan uietos á quanto previene este breve; pro~

hihimos asi bien que administren los sacra~ mentos á estraños, y que prediquen, co­tno lo prohibió Gregorio X" en el Con ... i1io general, sobre 10 c.ual enca rgamos as conciencias de los ObiSpos los que se; cordarán de aquella estrechisima cuenta' ue han de dar á Dios &c. Prohibimo~' ~~e despues de publicadas estas nuevas etras, mtdie se atreva á smpender ejecu ...

1 ..

'7 cían, ni aun socolor, ó con título y pre-texto de qualqui~ra instancia, apelacion, recurso ó declaraciQn de dudas, ni bajo ningun otro pretcxto, pues queremos que la extincÍon y abolicion de toda la sobre­dicha Compañia de Jesus y de todos sus oficios tengan efecto desde ahora é inme .. diatamente en la forma es presada, so .. pena de excomunion mayor ipso facto in.;. currenda, reservada á nos y á los Roma.l¡ nos Pontífices que adelante nuestros su~'¡' cesores fueren, contra cualquiera que in; tentare poner impedimento ú ob~tacul.: al cumplimiento y observancia de est~ nuestras letras, prohibiendo como prohibi' mas obrar, escribir y hablar en contr,' de esta extincion. Exórtamos á todos In Pnnc.ipes cristianos, que c~n la fuerza'l¡ a~tofIdad, y potestad que tIenen, y qu,,:~ DIOS les ha concedido para la defensa J, proteccion de la santa Iglesia Romanq concurran, con su, providencias, y cuj,; den de que estas nuestras letras surta~\ su pleno efe~to, y que ateniéndose 1) to~o 10 contemdo en ellas, espidan y pu;~ bllquen los correspondientes decretos: dE

1 {< C! aramos que la,e; pres:.:ntes letras jama.;' puedan ¡;;n ningun tiempo Ser tachadas

~

18 de vicio ne subrepcion, obrepcion, nuli­dad ó ínvalidacion, y menos de defec­to de intenciol1 en Nos, ú de cual(luie­ra otro por grande y sustancial 'que sea, y que nunca se haya tenido presente ni puedan ser il1lpugnadas, inválidas ó revocadas, ni moverse instancia so­bre ellas, ni menos intentarse COntra ~llas el remedio de la restitucion in inte­{grwn, ni uingun otrQ remedio de gracia )Ó. justicia, sino qUe las presentes letras, ~ean y haya n de ser siempre y perpetua­~enre válidas, firmes y eficaces, y se ob. p,erven inviolablemente por todos; y decla­ramos ~lUlo y de ningun valor 10 que de 0-

~ra suerte aconteciere hacerse por atentado iobre esto COl~ cualquiera autoridad &c."

Este es el principal contesto del bre­ve del santo padre Clemente XIV, dado en Roma en Santa María la mayor, con el sello del Pescador el dia 21 de julio de 1773.

A vista de tan terminantes letras apostólicas ¿c]uien no se admirará de ver Iá los Jesuitas restablecidos en España? 17 qué nos contestará el ministro que ¡tr-ancó al Rey el permiso para su resta.."

¡b1ecimiento ~

1

H) Mas suspendamos nuestras reflesio

pes y pasemos á ver la pracmática san don dd Rey católico Carlos IU, ,Y 1" ~ausas que l(! obligaron para la. esp~!siol y dice asi su,;tancia,lmente como sIgue. , tr Pracmática sancion de S. M., e fuerza de ley para el estrañamientQ d estos reynos á los regulares de la Coa pañía de Jesus &c. Don Cárlos, por i,

gracia de Dios &c. Habiéndome Gonfo l

mado con el parecer dI:: los de mi Cor' seio Real en el estraordinario que se c, lehró con motivQ del resultado de L ocurrencias pasadas, en consulta, de 2

de enero proximo, y de lo que sobre ell conviniéndome con el mismo dictame' me han espuesto personl.lS del mas eh vado carácter y acreditada esperienci estimulado de gravísimas causas re!¡lt: vas ;í la obligacion en que me hallo. con tituido de mantener en su bordinacio tranquilidad y justicia mis pueblos y otr urgentes, justas y necesari¡ls que reser en mi Real ánimo: usando de la stlpr ma autoridad económica que el Tod( Poderoso ha depositado en mis manos p ra la proteccion de mis vasallos, y re 'peto de mi Corona: he venido en ma

*

20

¡ar estr~ñal' de todos mis dorilinios á J05

egulares de la CompaGía de .Tesu'" y ue se OCUpC'll todas las temporalid;:h1.e~; y ara su egecuciot:l h-= dado plena y pri­ativ<l cUllIision y a:..ttoridad por otro mi eal d¡;creto de 27 de L blero al Cl> ocle e Arallda, pre,.;idente de mi Consejo &c. sÍmismo be venido en mandar Llue el onsejo boga notoria en todo~ mis rci-

¡Os la citdda mi Real detcrminacion, anife~tando Ú la~ demas órdenes reli­

~osas la confianza, sati~faccion y a pre­~o que me merecen por su fidelid~ld y octrina, observancia de vida moná:,tica, gemplar servicio de la Iglesia, acredi­,¡da illstruccion de sus estudios y sufi­'iente número de individuo~ Fara ayu­al' á los obispos y párrocos en el pasto spiritual de las almas, y por su ab,trac­ion de negocios de gobierno, como age­lOS y distant¡;s de la vida ascética y 1110-

lacar ( 1 ) igualmente dará á entender á os reverendos prelados diocesanos, ayun­amientos, cabildos &c., que en mi Real

(1) . Claro está que este elogio sub1 ¡me que lada S. M. de las virtudes de los de mas regula­es, éra para marcar y hacer resaltar mai lo. lÍmené:; y vicio. dQ los Jesuitas.

'-1

Person;t q.uedan .reser.vados los jlJstos grAves ,motivos que apesar mio, h~n obl' gado mi Real ánimo á e~ta ,ne~esaria prc videncia, valié,ndom.e úrúcamente de 1 .econón:1ic:t potestad, sil} proceder po otrQS medios, siguiendo en ello el in) pulso de mi Real benignidad ~c. Prohi bo paX ley y regl~ general, gue jamél pueda volver ~ admitirs~ ,en todos mis re nos á n,ingun individuo (le la <";ompafi\. ni en cuerpo ni en c,ol11unidad', con ni!¡ gun pretesto ni colorido que s,e:)." ni sob:! .ello adm,iti.rá eJ mi CO,nsejQ ni otro trib nal instancia alguna, ante,!> b.ien tomar las mas severas prov,idencias contra los.i fractores, auxiliadores &c., casJigándo' ,como pert~rba~ores del sosiego públi,'

'. Ninguo vasallo m,io, aunque ?eaf!c1es,i tico secular, ~ regular, podrá pedir s:a~ ,ta de hermandad al ,gener,al de la Co,j pañía ni ? otro el). su nombre; pena: ser trat?do .como reo de estado, y valdr, ,contra él las prueb~s privilegiadas: to ,el que mantuviere correspondenf::ia e los Jesuitas por prohibirse .seneral y ~I, solutamente será castigado con seve'rid' y los gue hablen ó escriban sobre es~

. providenc.ias S,erán castigados .como re,

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le lesa magestad &c. Ordeno al mi Con. ¡;ej,o. haga .espedir y publicarla real pr'ac­PlatIca para que lIegue á noticia de to­~os mis vasallos y se observe inviolable ... r.nen~e la presenteeri fuerza de ley, co­tno SI fuere hecha y promulgada en Cór. ~s, 'pues quiero se esté y pase por eil~ In con~ravenirla en manera alguna, por .onvel11~ .así á n~i .Real servicio, tranqlíi­,dad, b~en y utIlIdad de la causa públi-

~l de mB vasallos &c Dada en el P ar_ ~o á 2 de abril de 1767. " . , !!stá es, la sustancia de la fea t prac­JatIca de S. M. y ahora vamos á hacer pa pequeña observacionsobre ella ;asj ~Jmo sobre el breve de S. S. . Ya vemos que Jos Jesuitas fueron es­'~ña.dos del reyno por Cátlos IIl. y su­rumda su órden en todo el orbe cris­ano por Clemente XIV.; Con que <Í vis-

.de que Pio VII. los ha vuelto á rege. Io>rar, y que Fernando VII los ha ad ... itido .en sus dominios Con los mismos rechos y prerrogativas que tuvieren, ,Preciso convenir en que los pt'ime­

s ,es decir ela buelo de nuestro ac­al Rey y Clemente XIV., . fueron in­~tos, inhumanos, y poco religiosos eq.

23 estrafiar y estinguir una órden que pa· recia ser 'tan .util y de hombres tan doctos y religiosos ,ó que Fernando VII y Pio VII, han sido sorpren~idos: no hay remedio; ,esprecisoconveDlr en una de las dos ,cosas: pero .no es dudosa la de­.cision; pues se~ por punto de religion sea por política; sea por la P;¡~, s:a por la éCQuomÍa, fue unadetermlllaCI0n la de esta espulsionmuy sábia y .que hac'­mucho honor á las ;cenizasdel Rey Car,,; los nI, y á.1a santidad de Clemente XI~' así como muy .acertada y justa para en tar los males que preparaba á la Españ y al mundo, el orgullo, el engr~n~eci miento, el imperio y las .malas lnaxuua. de los Jesuitas.

Para prueba de todo esto y que s: desvanezca la mas leve duda que pued: tener el que Hose .haya dedicado com yo á saber la historia de estos hombrq singulares, .daremos algunas noticias cn riO!ras :que ignorarán acaso los !UdS ins truidos de la vida Jesuítica; pues algu nos documentos que ir.·sertaremos es' ca:/ imposible hayallvisto hasta ahora la prel. sa, como el que hayan podido verse má<' nuscriros fuera de las manos de los que

24 solo para su gobierno y conducta reser ... bada los escribieron.

El licenciado don Fernando Navarro Bullon, en e~ informe que dió al consejo real de Casulla en 24 de setiembre del año de 1767 en que fue comisionado para reconocer los papeles de 105 Jesuitas, di­ce entre otras muchas COsas 10 que sigue.

fr El gobierno interior de los regula­,es de la Compañía de Jesus, que ha si­~o un misterio impenetrable ~ ha estado v~en descubierto y patente á los que su­'Ileroq observar la conducta de estos re­';ulares; la circunspeccion y el disimulo 'Lue 60n los dos polos qüe abraza su re~ ~nacla política, ,en mi juicio se deben con. ;;eptuar POl" el .fruto de las maximas y re ... ¡las .que estudIaban y heredaban de sus ptecesores, ,como un secreto fideicomiso ,ue debian transferir el dia de mañana I 195 que ocupaban los oficios princi­¡ales, gobernándose solamente por esta :sp~cie de legislacion secreta, sin que (ara ellos sus constituciones tuviesen otra ~el'za que la de aut.ori¡?:ar á la sociedad ¡articular que formaban con el vano tí~ ~Io de estatutos. Este pensamiento en que () tendrá dificultad cualquiera que con~

25 fronte las reglas de la Compañía. con las que tenian egercicio y Qb~erVancla entre sus :iudi viduos, esta ayudado y confirma­do hasta la evidencia, no ~olo con aque­Ha particular y admirable uniformidad que se ha visto entre todos los rect.ores, p"tocuradores, ministros y demas .su p.e­riores, sin que les haya hecho vanar Ja~ mas en sus ideas y conducta secreta, ni

el talento ni el genio, ni la eondicion , . particular del que tenia cua\qUler~ em-¡ pleo de confianza, sino que ~amblen te-' nemos en apoyo y .confirmaclOn de es~a. verdad el hallazgo de un papel, que Slll

duda contiene muchas reglas que hemos, visto practicar en el trato, conversacion y negvciacie:nes de. estos regu~ares: este pape'! que está escrito mucho. tlem?o ha-,: ce, y.de una letra muy semepnte ~ la d~J varios libros antiguos de sus archl vos 0) bib.li.otecas, está dividido en dos partes:l la p-dmera con el título de .(1visos discr:-' cretas á los bien entendidos, para ser tem"; dos y reverenciados en reinos, provincias, repúblicas, ciudades, villas y lugares: CElU­

tiene treinta y cuatro reglas ó preceptos sobre el porte esterior y personas con quienes deben tratar los individuos de la

26 ~ompañÍa., como príncipes, grandes, l1li­n.JStr.os, v lUdas ricas y demas gentes prin­clpales; y l1lodode ganar á suscriad05 y familiares, y hacerse bién vistos gene­ra¡men~e Con .otras reglas para el empleo y. elecclOn de los confidentes qué sumí_ nl~tren toda especie de noticias parad aCIerto .del gobierno interior y reservado, y lasclrcullstancias que deben adornar

i,á uu superior de Jesuitas. !l La segunda parte se titula: Singula_ les y secretas moniciones para particulares ,,-per sanas de nuestra Compañía, traducidas ,~de latín en romance, y contiene los capí ¡tulos siguientes.

" Cap. 1.° Degué Stterte se ha.de mane" tiar la Compañía mando tiene .alguna 1Jl1e ... ;)va fundaciO/I.

Cap. 2." Q¡¡écosas se .hm) de hacer lIe­pesariame¡\te para gozar la íntima familia. ¡ridad de lorgra¡¡des y .de los príncipes. I Cap. 3·° Cómo .nos aprovecharemos de los senores y príncipes que no tienen dinero) l¡jel1m empero grallde autoridad en su re-'¡pública. •

Cap. 4·° Qué cosas fe han de en~ omenciar á los predicadores y confesores

~e los príncipes y magnates.

.. "

1

2.7 Ca p. ).0 Qué se ha ~e hace,f con los'

religiosos que siendo semejantes .tl nosotros, en muchas ocup¿l.:ion.es. :1>OS qwtan mucho acrecentamiento.

Ca p.6.o Cómo los nuestros reconci!ia­rán con nuestra Compañía las viudas ricas y opulentas. . . . Cap. 7 . Cómo se handecot1servar las 'viudasque ya SOil IJuestras ,y como. se ha .dedisponefde los réditos dó sushaClendas.

Ca n. 8.° De .los remedios que se han de .aplicar para que los hi~os é hijas de m¡e:i- i tras viudas .devotas, tomen ejtíldo de .relt­giosos.

Cap.' 9;0 D.e losr¿ditosque han de ha. ,ber IJuesttoscolc gios.

Ca p. 10. Cómo se ha de dar á enten .. . der el rigor que la Companía .tiene en 14 : regular .disciplina. .

Cap. 11. De qtl~ r'nodo se habráll to- . .dos los nuestroscoll los .que se espelieren.

Cap. J 2.. De los defectos que se IwllilfJ .en .105 man.cevos que viellerl á .nuestros co­legios, y ,conque .arte ietendremos .á los que fueren á propósito. . Ca p. 1 3. Cómo .se han .de haber los 1WeJtroSCOll .las monjas.

Cap. 1 + De los casos reservados elJ

28 nuestra Compañía; y de las causas por ql¡t elfo espele á muchos. '

CaE: 15· Qué personas de Il[/estr~ Companza se han de conservar en ella.

Cap. 16. Del desprecio que mostrare­mos tener á '(Js riquezas tb'c.

y dicho pape~ concluía COI~ un p,írra;oo f~ que ha parecIdo muy conveniente co­pJaraq~í á la letra, y dice así: estos avÍr

\' sos particulares han ~e ser guardados y oh, ~', servados de ¡Oi supertores ; comunicarlos COl2 ~' pocos ~e los. n"ues:ros, y esos de los m,a.s gra­.q 'Ves; I~HtrUJr.an a los de/'JIaJ conforme á es:-,1; t~~ avlSOS, s~n qu.e elltienda/J que los tie:-I fl.,1 por escnto, y I,JO q~¡e es régimen de llz '. natural prudellCla, y ,estos á quienes illS­fij tmyereIJ hall de ~er solqmellte de los útiles '7 ~ la Compañía y bien esperimel~tados: mas

JI estos avisos se perdieren así escritos que cJ~rf(l p~ra la Compa~ía gra/¡de mal, ; vi­r meren a mallOs "de los; estranos, que preci­, same/lte le, dara/2 la mterpretacioH que elJ 1 nada le !erUl favorable, IliéguelHe en tal ca-

so, yaf/rmen t9dos nuestros hermanos, qll~ no SOft IJUestras, ptles ir,áll en ello cO/lfor-:­me~ :0/1 los dema-s religiosos qtle 110 tienen flotlCW de ellos, y muéstrwse Iluestras re,­glascomtl/Jes, contrarias á estas particu-

.\.

29 lares; en este ínterin hágase grall diligen­cia, y si alguno de los nuestros descubrió el secreto, arm COII lebes congetllras sea espe­lido: pero 110 ho de ser t{l1l 11egligente el su­perior, que se pierdan tan grcl1ldes secretos, y que deje de obSr:'rvarloJ."

Hastá aqul la insercion que hace e11i­cenciado Bullan de didio documento tan curioso, é interesante, el cual nos patenti­za ya las maximas de los Jansenistas, con· fesados por ellos mismos, que esto nunca se pudo lograr ni conven~erlos, por que siempre se escudaban con los Jesuitas, y varias órdenes que deci:1.n eran sus ca­lumniadores é irreconciliables enemigos: i

. este d0cumento, si e~ gobierno pudiera I

algun día necesitarlo para afirmarse de cuanto va espuesto, no tendria inconve­niente en franquearsele para que pudiese con pleno conocimiento resolver lo que tanto interesa al bien del Estado.

Pues aun sigue despues el licenciado Bulloll' y dice: (r aunqlle la sutil asechal1za dI! esta artificiosa prevencioll· puede hacer dudosa la autenticidad de este mmwscrito, por lo mellas no por.ran mgar los regulares de la Compañía, que el autor de él, wal­'luiera qr¡¡;, fuese, hll cOfiado fielmente Sij

3° doc¡trina de las acciones, trato y modo d~ e/¡cnos reg:ulares, y que este es el régimen y gO/)lerno que verdlldL ramellte h(lIl obJervado.

~a magnificencia en el culto di vino era el pnme:o de los cuidados del gobierno de lus, ]OllltIH, Y en lo que verdaderamente lL/clan con fruto los primores de ms maxi­mas, 'por que con el crecido número de co/¡­g~egllciol1es, memorias y obras pías, que te­n:at~, no s,olamen,te lograban tener sin gasto 11: ~lSpendlo propIO, frecuentes y sUl1tosas fes­t¡~'lda~des q~1e a~raiatlla conCtlrrencicl del pú.

~ bltco a JllS zglcJtas, y les grm¡geaban su esti­~ macifJ11, si 110 que de aquí nacian otros tantos

,1 1 emp eos,que repartidos con el/lombrede pre-fecturias entre los beneméritos de la Com-' pañía, propOrciOI1?lba/l 4 cada UIlO de estos i~ldivid,lIos el uso y l11cmejo de caudales, COI1-suleraClO1J entre las gentes, y una razona­ble tlti lidad, bastallte para disfrutar las cOl11odidqdes ,d: la 7,:ida que puede propo­nerse ~11 religioso: de modo que entre ellos se miraba la direccion ó prefecturía de una capilla ó congregaci011, como el descanso de sus afanes y carraa literaria; y wlazado de esta merte el interes, partiwlar de los in­dividuos de la Comp!lñi!l COII el cornUI1 del ~uerpo, se esmenjba c'ld'l una á porfia en.

: ~ \ , ... .,.

31

los adelantamientos de la hermandad ó COI1-gregacíon que se ¡es habia fiado, procedien­do en todas ocasiones acti'vo, industrioso y aplicado, imitando su celo los que 110 h(/bi"m llegado á eJte término para mostrar,se dIg­nos de eJtos oficios: y de estm particulares collve1liencias, reSLIlta/;a la gloria y aulYlC1l­

to espiritual eII los muchos devotos que COIL­q[IÍJtaba su política, como el acrecentarniel1-to de los bielles temporales de la Compañía."

T(!nemos con estos documentos com­probadas las maximas de los Jesuitas por SU misma vaca, rt>specto á que se acreditan con sus mis,mos papeles, que autorizadO~S como estos, lo están, son una confesion sin embargo es preciso continuar la in sercion de otros muchos testimonios irre­fragables de :,;us ideas políticas y religio­sas, que son las que tanto estrago han hecho en la humanidad, en la religion y en los gobiernos, pues en el día que re­nace la libertad del hombre, y cuando la luz y la verdad se defienden por to­das partes, no se debe ocultar nada bue­no, ni nada malo en que pueda resultar algun bien ó daño á la Nacion. . Lo:> varoues mas respetables que ha tenido la Iglesia Católica, son los prime..,

32

ros que han acusado á la CompaóÍa, y han autorizado su:; acusaciones, marcan­do sus errores, sus impiedade!>s sus en­gaños y todos sus defectos, con mas fuer­za que lo hicieron despue5 los Jansenis­tas; á quienes los Jesuitas atribuian, por sal varse, la sublevacion de todas las na­ciones de la Europa contra su religion: en el número de tontos, hombres ilu,tres como ban declarado contra los Je:milas, ~e hallan un santo Padre 1 varios carde­nales, muchos prelados, todo el clero de la Iglesia galicana, los mas célebres teó­logos, la. mas sahias universidades de la

j Europa, los mas respetables tribunales, 1105 magistrados mas incorruptible,; y en

fin misiones, embajadores y naciones ca~ tólicas.¿ Y es posible que todos han ele haber errado y sido injusto para venir otra vez los Jesuitas á España á erigir su trono de despotismo y preocupacion? ¿ se­rá preciso que declaremos por arbitraria é infundada su espulsion? ¿Diremos aun que fueron inocentes, y el orbe entero calumniadod zY últimamente, seriÍ regu­lar que inocentes ó culpables vengan á ser otra vez los dueños de la nacÍün? ¿ Ha.­brá un motivo que autorice cuando la

33 mitad de España se compone de frailes, el aumento de esta religion? ¿yen todo callo son útiles, son necesarios, tieneI\ el aprecio de la Nadan~; nQ, no, y mil veces no,

~ Qué es lo que les arguyen tau:os tes­tigos? crimt::nes., esce:>os, y de~varíos tan evidentes COlDO el Sol. Desde su estable­cimiento hasta su espulsion ha enseñado sin interrupcion la Compañía, la doctrina abomin~lble yue autoriza matar á los re­yes; y si no veán:;e los autores que tra­tan de las ideas j.;:~uíticas, leállse sus mis .. mos li bl'os; veáse la doctrina de sus mis­mos teólogo~ yveánse la~ censuras que proscribieron sus libros; y los decretos que los cOlldenáron: esto no es dificil al que sabe leer, si es un poco curioso; aunque en este caso es materLdmenteimpl}sible que lo ignore. Las iilVenciones di: Moli­na bien se sabe el concepto que mere­cen, y que su docl ri!la es' propia y esen­cial de la Compañía: esta la sust~'ntó diez años á los pies del Papa en las 'célebres congregaciones: de auxiliiJ, y tán léjo's es­.tuvo de dejarla y abjurar de' ella,' qu~ llegó hasta la imprüdellciade tlber~r que esta:.doctrina June~¡;a y es~afl'da1dsa' se

3

1

3+ deClarase por dogma de fé. Las censura~ de .los. sumo:; pOl1tlfices, ohispos y demas~ ,de los errores sobre la santísima Trini­dad, Encamacion, Redencion, Sacramen­tos y otros, aun existen, y deben estar en su fuerza y vigor: su moral corrom­pida y perniciosa ha infestado toda la Iglesia, y la han difundido por todo el mundo con dano de la salvacion de ¡nu­merables almas ~ esta doctrina detest:lble la hallamos, tanto en los libros anriguos, como modernos de los- padres de la Com­pañía, 'y tambien están en las sentencias de los dos poderes supremos que las han prohibido: han sido pertinaces en soste::­ner su perversa y detestable doctrina. hasta despreciar las escomuniones que se han Julminado contra ellos: su política

.era diabólica y tenian ~n su apoyo' la im­postura, ,la ca lumnia, la mentira, los

.falsos testimonios, y las prácticas y arti­Jicios. mas malignos: el abu._o que han hecho de los sacramenros de la Peniten­cia: y. ;Eucaristía, ha sostenido sus detes-­rabIes ,conspiraciones .. c~)Utra la paz- de' los esrados, la vida de los sobera.nos, y la buena mqral. La Compllñía era inde-pen.:" diente·de todil. autoridad, y masbteu-,po.-

3) demos asegurar que los privilegios increi:­bIes, conseguidos por sus generales, ele­vaban á los Jesuitas sobre los párrocos, obispos y órdenes religiosas; sobre todos los tribunales, los reyes y hasta sobre los papas y sobre la misma Iglesia universal­en términos que lo dominaban todo y se ieñoreaban dcluniverso: en todas partes se habian establecido, despreciando las opo iiciones: eran unos usurpadores dI! lo derechos y bienes de lo~ obispos, párro cos , universidades, religiones; y de lo .príncipes y sus súbditos: siempre fuero codiciosos,. por amontonar riquezas po medio del comercio esrensivo á todo, ,por medios ilícitos, contrarios al· decor< al .honor y á la céluidad: su obstinacio .fue increible en favorecer y practicar l

sos y ceremonias idolatr~s. y sacrílega :á pesar de las de,cisiones de la, santa St de. Su crueldad. ha sido sanguina¡:ia y bá bara en t·)dos tiempos y paises para m ,tal", asesinar y dar venenos por venga se. á aumentar su dominio: esto noes ex g,erar, ni en mí reside ningun,motivo ódio ni resentimiento contra la Comp fiía: cuanto digo puede probar'ie en E paña, en Madrid mi;¡mo, sill Ilece¡,id

*

36 de ir á pedir informes al Japon: zQuié .... nes fueron los ma,; ardientes predi.:ado­res. d~ la liga en. Francia? ¿ 11 quien se atrIbuye la horrlbl~ conspi'-acion de la po~vllra en lnglareTla? z'ú quien el furor e~cl.:"do CJntra la Gnivec.,idad de Craco­vía? A quien los fune\to"S efe.:tos de la muerte del rey don SeIJastian, en Ponu:. gal ?. Las vioÜ:ncias liue cometieron en Alemania por tomar los bienes y abadías de las ór~cnes, bien pubü<::a-s sao. l Y la-s persecuciones de los obispos de la China-, y la morta[)dad que hubo con la rnvasiou de los tártaros? que me digaG' 1'os Jesui .... :as quiéoe.~ fueron los cau"untes de e~os llales. ¿ Quien. sino la COlllpañia exrer­ninó elcristíaníslIIo en el Jaron? pues le América que respondan las ceniza~¡ de os santos obispos del Paraguay, y b Pue­)la de los' Angeles y .... últimamente, la noral de los Jesuitas ha' sido tan buena' , an hum:llla y tan religiosa, que permi-ía el homicidio, el parricidio, infanticidio . , . , eglcldlO y el dar por equivalent~ un ó~igo suavecito para despachar poco á oco á cualquiera al otro mundo, en to­os los casos en (l11C se trata de preserYar~

de alguD l~el¡gf(~, salvar la hacienda ó

.I.,

37 aumentarla, y vengarse de lo~. males ó afrentas que se hubieren padec~do: des­de su origen se le empezar~? a conocer estos crímenes á la Compama de Jesus, pues en su éuna era casi todo ,lo que fue des pues: el aumento de sus nq ue.zas, el de ~u crédi.to y de su poder, nO hlZ? mas que manifestar l~S,' y. rna~ .cada dla. 10&

vicios con que naClO; siempre se ha tftta­'do esdamando contra ello, y se h~n p~o­ftnizaao justísimamente con. admlracloll universal tos funestos efectos que se han esperimentado :el arzobispo Sil.icéo pro­hibió el confesonario á los Jesuitas en Sl

arzobispado, .con sentencia de escomu· nion contra las que fueren á confesa.rs.e con ellos; mandó á los párr~~os y c~­sas religiosas que no los. de.l:H.an dec,ll misa ni predicar en sus IglesIas, y aur prohibió el confe.ouario á los sacerd~ tes que hicieron coneHos 10$ ,~gercl­cios espirituales: MelchD~ C~l1~ diJO, que esta era una sociedad antl-Crlstlalla, Co~ pañía de lo, precur~ores ~el ~ntecrts to, y que causaria males Sin Ol~mero la Iglesia, aplicando á 105 J eSUltas est~ digno prelado el capitulo 3 de san Pablo lIegtUlda carta á Timoteo. Hacen voto d

38 pOl)r~za, y juzgan que pueden ser pro .. movdos a la~ dignidades ec1e&iásticas, obl'pado~ y arzobi~pados, y gozar la co .... la":lOn y u'mfrmo de los beneficios: dicen que no estan obligados á de~ir ni oir mi. sa sokmne, maitines, vísperas. ni otrat horas canónicas, haciéndose exentos has­ta de las obligaciones de los legos: el mis­mo Cano los llamó teatinos, y en la carta q~7 en 2 S de setiem bre de 1 5 57, escri­blO desde Salamancá al docto fray J llan de Regla, confesor de Carlos V., le de­cía que los Je~uitas eran los alumbrados que ,d demonio tantas veces ha sembrado en la Iglesia, y los Gnosticos que la han de acabar. El arzobispo Bromivél decía que se habia levantado una compañía de negociantes, bajo de la denominacion de Jesus , . que engañaba á gran número de per~onas y que vivia como los escribas y farISeos; que con el tiempo abolirta la ver­d.ad, Y, que toma.ría varias formas; gen­tIles con gentiles, ateístas con ateistas ju. dios C011 judios &c. Para conocer el c~ra­zon y designios del hombre; serán conse­jeros de los príncipe" los encantarán sa­br.án sus mas ocu 1 tos ~ecretos; pero' las lnIsmas manos de aquellos que mas l~sha-

, {

39 yan favorecido serán las que tos vengan: á esterminar, por que se harán odiosos á todas las naciones, y serán de peor :con~ dÍcionaún que los Judios, pues po ten­drán lugar fijo en la ,tierra, y. un· judío hallará mas amparo que un JesuÍta. El mismo san Fnll1cisco de Borja, que fue general.de la Companía, dijo en 1 '~6o que vendda tiempo en que los Jesuitas se o· cuparían solo en las .cienci.as humanas, sin aplicacion alguna á la virtud, por que la ambicion, la soberbia yel orgu-110, entrarían ,en ella á .rienda suelta. En el mismo concilio .oe Trento, dijo el obis­po Bellai, que la Compañía tío habiana­cido mas que para hacer nuevos dogmas de fé, perturbar la quietud de la' Iglesia, arruinar la 'gerarquía, y abolil' la juris­dicion de los obispos. E,tevan Paslluier, dice que la Compañía es un seminario de impiedad, secta la mas unida -'] ambició­,sa, cismática, ycdificada sobre·.laigno­ranCia .de la antiguedad: secta que debe temerse mas que la de Lutero, por que de este y de Cal vino se cautela toda con· ciencia timorata, al paso que tod'o in:c>"­cente se dejad. sorpreender deI veneno Jesuítico, creyéndolos y estimál1dolOs co-

1

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mo primeros protectores de la Religiort Católica: no hay príncipe ó potentado que. tenga seguros sus dominios de su~ at~ntados. Repito qúe no tengo ira ni mIO' b ' , ,

e ~azon a rJga averston a Iglll1a con ... tra OJl1guno en particular; y si, contra el c.uerpo P?r haber sido tan perjudicial. Dona CatallOa de Austria, reyna de Por ... tugal, lI"'gó á escribit, á S'an Francisco de ~~rja, siendo general de lo.~ Je,suitas, di­clendole q~e' su Compañía habia perc!ido su reputaCl0h y el bien espiritual de las almas; 9uede todos los males que afligíall :t su, re 100 eran autores lo'; Jesuita,; que hablan tenido la maldad de aconse:ar al

' .1 rey su meto que la de~terrase del reyno, en pago de lo que les habia flvoreciclo, has­ta el extremo de nombrará un jesuita para maestro dell'ey su nieto; que dicho maes­tro le,habiii precipitado en Costumbres tan desarregladas que lehabi<t privado del.co­razOh de sus vasallos; y separado enrera-~ente de :las sendas de la virtud; que ha­bta logrado la abol'reciese para no tomar­la en nada consejo &c, El Papa Clemen_ te VIII. en un discvrso que hizo á 108 mis­mos fes'uitas el1 1592; les dijo entre otrag Cosas" . que la curiosida.d, como primer

\ ¡ 4 1 ,

graJo del orgullo, era la que les moví!, oí introducirse en todas partes, y mayor,¡ mente en lo~ confesonarios para saber d~l. los pl!nitentes todo lo que pasa ello sus ca!: sas entre hijos y domésticos, y cuantos ~~. ellas habitan y las frecuentan, y del mlS¡ mo modo en el barrío; curiosidad C~.p~lt <le producir los mas perniciosos efecto;!

l' h I que si confiesan á un prInClp~ se ,ace~

señores dd gobit::rno de todo su pal~/clO, 1J,

q uieren gobernarle los estados ~clendoJi5 d . b' ,~ creer que nada le sal ra len Slll su cu..;

dado y su industria; ql~e el se~undo g.r.~ do de su orgullo es su smgulandad ate(~ tada ,. por lo que a~n en materias de do~

trina hacen profeslon de no abrazar li¡' opiniones de ningun doctor aprobado, esta es la causa de censurar á santo, ~(,:. más y oí todos los santos Padres, ~l~tl guiéndose de to~os los, dernas rell.glOS!H por su gusto de smgulartdad y tomandol1 la libertad de notar á lOj otros de MOIl~' chismo, y de creederas y usos su pers [ ciosos. El tercer grado mas eminente 'I~

. orgullo en ellos es el d.e creerse infa4:~1 bIes, como si fuesen impecabtes, en t,~ extremo que dicen no hay correccion qi~ hacer en ellos, por que no hacen ca,~

4:1 ue sea defectuosa. Todo's los djas se lle­ab:m tres ó cuatro horas en el confeso­ario con personas que se confesaban dia­¡amente y que era imposible les digesen s:! que mereciese la absolucion; de lo

ue se infiere que por medio de la con­.sion sabían todo cuanto pasaba en el lundo. ¿ Y puede darse abuso mas hor­lroso que servirse de un Sacramento tall mto para adquirir noticias tan profanas¿ {as esto 110 debe causar admiracion á sta d~ su doctrina, pue;; ellos miraba!l Itl el mayor desprecio á los antiguos doc­res de la Iglesia, como Sln Gerónimo, n Ambrosio y demas, por lo cual ha­a mucha razon para acusarlos de que :fendiendo á su Molina, intentaban vol­-r á la iglesia de Dios el dogma de Pe­gio. Su princi pal voto es obed.ecer per l1lia et in omnibus á su general y supe-

<-.

lr: las palabras de este cuarto voto son :raña~ y horribles, porque llegan a decir: illo christum vel tU PI tesentem agnosca1jt. su general manda que vaY,an á matar, Ó cer matar al Rey, es preCiSO neces~l'Ia­:nte hacerlo: Arnaud dic~ tt Es necesario ~ yo confiese, qtle la cólera y la justa ill­gnacioll me hacel1 salir fuera de mí, ctumdo

• t I

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43 'Veo qu~ todavia tst05 traidores ~sto5 facinero;' JOS estos aseJinos de los 1'eyes ,y estos confe­so:es públicos de parricidu5 aU,n existe'.l entre nosotros aun viven y aUIl respzrcm el aire que los dem~s respiramos, Todo recaía en la Com pañía por med ¡él de los,testame,ntos que ellos 'ca ptaban todos 101i dlas, ponIendo de una parte el miedo del infierno en las al­mas vecinas á la muerte; y por otra parte el Paraíso abierto para aquellas que daban sus bienes á la Compañía; Ve aquí los pn:ceptos de los Jesuitas: Matad: deJfe­dazad: ahorcad: atorme1lf ad: &c. TenIan un libro llamado de la vida, donde sen­taban todo lo que sabían de las confesio­nes, de I secreto de las casas, y todo cuan­to se bacia y pensaba en ellas; pregun­tando á los hijos, criados, y concurrcl1.­tes. Ellos ban contaminado la cátedra de la verdad, y parece que los de esta ór­den eran los espíritus malos del pueblo que le acompañaban para atormentarle. Con la, confesiones y predicaciones han sostenido su mala doctrina, perturvando las conciencias de tal modo que no tenian un solo momento de descan$o , ~ino se ha­cia lo que ellos mandaban. Sus astuci~s eran tanto mas peligrosas, cLlauto mas·dl-

~ 44 H ficiles de descubl'irse: los conventículos

sordos y. ocultos de estos hombres fingidos 1 eran mil veces mas temibles, y se COll­

~: servaban mas tiempo en el espíritu del s ~ueblo eng.añado ,que lo sería un par-

tJ~io de~cublerto donde no hubiera mas que ,,1 viOlencIa. Asaltaban á los hombres por ia u ~)~S escrupulosa y peligrosa parte de sus l' aOlmos, que es la conciencia, haci~lldoles n la guerra con la capa de religion, y sor­a prendiéndólos cuando iban á entregarse á ~t ellos para descubrirles ,us pensamientos u mas reservados, y pedirles dictamen y rl consejos. Sus confe~ione., no eran mas que n lazos para prender al pueblo y manejar­~ ,lo á su gusto sin celo ni caridad. Enrri­f <¡ue IV. rey de Francia en el decreto de 'r expuIsion dijo: Manifiestamente se recono­g ció antes del levantamiento, y dttratlte todo 1i el.Ct~rJo ~e las presentes turbaciones, qtle del )1 mmlIterlO de aquellos qlle se denominan de :t la Companía de }esus, Ó cOllgregacion dr: i este 1JOmbre, hall salido el movimiento, fa­s ».le!Jtacioll, y seguro de muchas de aquellas e Slllles.tras prácticas, designios, cOIl~'e/ltícu­:1 los, rnaqttinaciones y pretensiones qu~ se for­~ f1~arOIl para destruir la autoridad del Rey & difunto, nuestro estimadísimo seriar y h~r:-

41 mano, é impedir el establecimiento de la nuestra, cuyas prácticas y llwqui/l(¡ciones Je dieron á CO/loce,' t({nto mas pemiciows, cuan­to el principal jin de todas ell~s ha sido in­ducir y persuadir secreta y pú!JliCl1mfn(.~ á m¡~¡tras vasallos, eOIl el pretexto de pi::dad, la libertad de poder at;;'1ltar coatTa l:l vida de StlS reyes. E~to se descubrió en la impiísi­ma é infidelísil'YUl resolul'Íull de quitamos la vida intentada el año pasado por Barriere, confirmada y (/utarizadu por la única i1lfluc­cioll é imtigacíon de los principales del co­legio de Clermont , profesos en dicha Compa. ñía: y ahora Tluevamellte por el ate1ltado qrte un mozo de ed(ld de 18 élños llamado Juan Chatél cometió cofltra nuestra propia persona. Dicho Chqtél ha sido criado y educado al~tI­nos años, y ha hecho sus estudios en dicho colegio de Clerrnont , y dió fácilmente á co­nocer que de esta única escuela tomó las ins .. truccioTles, c01lSejos y medios para esta sacrí­lega temeridad. Mandamos, queremos y es 1luestra voluntad, que todos los sacerdotes y estudiantes del colegio de Clermont y todos los que se dicen de la Compañía, en Ctfal­quier lugar y ciudad de este reino que es­tén, y como quiera que 5e hallen, como cor. n/piores d~ l~ jt.ll.:~ntud , periurvadares dd

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.1 t

46 deJcanso público, nuestros enemír:os del es­tado y de: la caralla, migan rleniro de ter­cero di,¡, lbpues de illtim,¡da hl órdm, de esta ciUcldd, y gllillce días despues de nues­tro reíllo: y qrte pasado dicho tiempo, si se hallaren algunos, sean castigados como de­linwentes y reOJ de lesa Magestad; y los de­clararnos dcsde lw::gú indignos poseedores de lor biwes, tanto mUebles como raices, que tiWt:1I eH nuestro reí 'lO ~c. ~c. ~c.

El venet"élble Lanuza dice entre otras mucha,; cosas lo siguieute.= Desplles que el Padre Luis Malina y SIIS sectarios prefi­riera,} 1m fa1U1ticas ideas de su cenbro, al sentir de los santos Padres, se corrompiero'l las esmelas, y se llenó toda la Elpaña de perturbaciones las mayores, y mas arries,ga­das que las del tiempo de los Gt?belinos .... Los male¡ qlJe yo preveo causará,! algan dia los .]es¡útas á la Iglesia, ya los prevey6 antes .que yo el ilustrísimo M¿/chnr Cano, qlle es­-cribió en estos térmilHlJ al P. Rer?:la, confe­sor d~l Emperador Carlos V. Ay! Plegue á Dios que no me suceda lo que antigua­mente á CasanGira á quien nOliui:;it:rotI creer antes del incendio d~ Troya. Si los padres de la Compañía cO!lrinuaren C0lTI()

han empezado, quiera DloíJ gue no lh:gue

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.47 tiempo en que los reyes los quieran rc-; sistir; y no pued:m , pues se atre\'.:rán ;:

I ! ". n- I prevalecer CO!ltra a 19 es la oc lOS, ~I contra ti trono. •

Los catülicos de Inglaterra decían aO~1 Papa por medio de una dípuracioo., qwl cada dia se enccndiJ mas la guerra Intt:St tina por los Jt:~ujta5: que todo su fin er., engañar y empeñar ea su favor á las P~q sonas ricas y de talentos: que los que nI,:. lie rendian á sus promesas, pade~ian in\, numerables vejaciones! Que hacl:m vot,~' de ser pobres, y vivian en abundancia \ comodidad; que todos los sacerdotes qu;.. no eran alumnos de la escuela de los Je·~ suita~, ó que 00 respetaban su poder~, eran. objetos de mofa y escaraio; y pOi] últi;no que llegaba ya al mayor extrem,~. su orgullo y presuncion; atreviéndose ;~; decir soberbiamente que por el crédito d(~ los amigos que tenían en la corte Roma.~ na privarían á todo católico la entraci;~ para dirigir sus quejas al sumo pontificeH

El Papa Clemente VIII. en un disi-;. curso al duque de Sesa, embajador d~.'~ España en 1 6c)2, dijo, que estaba cruel.1S mente afligido con la infinidad de pcli.,,": gros qu~ nacian todos 10i dias ce las nue.~

4 8. ras opIniones que tos Jesuitas esparclaQ )úblicalllt.>nte y sin disfraz por todo e! u­liverso en materias teológicas: refirió al­runas, especialmente una muy nueva pro-) d d· , iucida el1 Florencia, don e pre ICO un resuita: que una persol1a se podia confesar )()r carta: error contra el cual su Santi­:laQ babia mandado al comisar~o del san­o Oficio, que procediese rigoro:óamente: tñadió el santo Padre que tambien tenia Jena por !R libertad de estos religiosos ;n la;; escuelas y en los púlpitos donde iespreciaodo la autoridad de los santos Padre:,; y doctores de la Iglesia, enseóa­Jan todo lo que les venia á la imagina­:ion de viva voz y por escrito, no solo

, ;obre la materia de la predestinacion y de yracia sino tambien sobre otr05 muchos :> < ,

Juntos, y por último declaró que los Je­t ¡uiras estaban habidos de una ceguedad ~xcesiva sobre los auxilios de la gracia :livina, y que le hahian presentado un es­

e :rito de siete oja~, en el que .referian en I 3efensa de Molina innumerables lugares ~ le san Agustin, per-o citados infielmente,

'Y contra su verdadero sentido para bur­íarse artificiosamente y hacer prevalece!:' la doctrina de ·Molina.

)

+9 ¿Y que dijo el p:trlamento de Pads á

Enrique IV, sobre el decreto de restitu ... cion de los Je'iUita~ enI603.? Representó á S. M. diciéndole que el restablecimien­to d~' esta orden se creia tan pernicío,o al .cstad(), que todas las ordene~ religiosas se habian opuesto á su recepcion; y el de';' creto de la Surbona fue, que esta Compa­ñia se habia introducido para ruina y no para edificacion. En T 564 por un ¡lUto a­cordado se les prohibió tomar el nombre de Jesuita,> ó de la compañía de JeslIs'i pero no obstaéJte esto, no dejaron de to~ marIe, diciendo era un derecho; y -Ani­bal Codréto, individuo de esta orden,!!n una obrita que imprimió ee Leon, asegu .. ró gue su Compañía habia tomado el nom: hre de Jesus porque Dios habia dado á los Jesuitas por comNñero á su hiio Je­sl1cristo~ y que Je<;ucri,to los habia r~cibi ... do por compañ:.!ros: Nadi1:l creo se aIre .... verá;.'¡ decir que falto á la vt!rdad en CU<UI­

to refiero, pues al que fuere tan insens~to que me crea capaz de semejante aud,ícia para con el público, le cito con todo cui­dado los autores, parages y años para que los busqu~ y los lea; y así si dudare del ~aso que acabo qe referir', vea el librq

t

SO I que le indico de Codreto, quien a¡;eg1.lrá

á Patri que no podia hacer obra mas me~ citoria que matar á la reina de Ing~aterra; por cuya accion los ángeles lo llevaball al cielo &c. y ya se vé, como su prim:i­pal voto hemos dicho y re petimos para mayor asercion, que era obedecer ciega­mente á su general ó superior per omnia, et in omnibus, y añaden Í1¡ illo christum velut pri2sentem agTlosmnt, de aquí hall dimanado los muchos y horrorosos atenta­dos que se han cometido, pues de su a­cento dependia la. vida de qualquiera,- in­cluso el rey, y este era el mas expuesto segun las máximas de estos religiosos: ellos. no reconocían por superior sino al ¡¡anto' Padre, á quien hacían juramento de- fideüdad y obediencia (en la exterio'­údad) ,- y tíenen por máxima indudable: Que el Papa tiene libre arbitrio para' excO­mulgar á los reles, Y que f.Hl rey excomuJ:­gllrJo es un tirano; que cualquiera de losi qu~ viven en su reirlo, en teniendo una órdm de la iglesia por menor que sea, no puede ser jtJzgóJdo r~o de lesa magestad, sea ctlal

I fuere su crimen, porqt¡e no son vasa!los su­'os, ni eltán sujetos á su jurisdiccion: dI. ral modo qu~ los ede¡iáJ;icQs eJtán e",mtos

r I

sr del poder secular, y pueden sin castigo poner; ~us manos sallgrientas en las personas sagrq­f.las de los reyes d7c.

Veáse tarpbil!~ la vida del cardenal Belarmillo, jesuita, escrita por otro lla­p-lado Jacobo Fuligatti, y seqallará en e libro 7. cap. 2. la prueb~ mas convin· cente del orgullo, dominio, doctrina, in .. subordinacion, i nm9ralidad, y coraZOIl sanguinariQ de l()s J~suitas: dice en pala bra~ terrpínal1te~, que habiendo el pnp Clemente VIII. declarado al cardenal Betar mino la resoluciotl que había formaclo d condenar la doctritla de Molina, Belarmin le respondió: vuestra Santidad no lo hará este mismo, oyendo hablar de esta resolut;Ío del papa al cardenal FratlCisco Ma.ría d Monte, le contestó: yo bien sé que el paF lo quiere: confieso que puede: mas no hará; y si emprendiese egecutarlo? mor rá primero~ -

El jesuita Gellot refiere tambien es hecho en el 8 libro de su gerarquía, e pítulo 18 pago 33, Y alaba esta profec de Belarmillo, afirlllalldo que se cumpl efecti vamente en el año J 60 S, á tiem en que el papa Clemente VIII. iba á p blicar la cen5ura del libro de Molina;

*

~l

?retende descaradamente dicho ecHot qUl'!

!sto- se respete como un milagro: lo que Jarece es, que esta muerte auticipilch del

I Japa Clemente VIII. es una prutba cier­! .¡. de que Belarmino teuia mas s~guro el I Ion-de profecía que Malagrida. ¡Que bor­· 'ores y que esc;Índalo! ¿ es posible que los : )apas y los reves h;(yan tolerado sobre la. : ierra á semeja~1te sociedad contra los ín-• ereses de la misma sociedad y de la reli­: ;ion? Dios omnipotente ¿ cómo ha tole-: ado entre hombre" y entre cristianos qlle' "omine tantos años una secta extermina_ ¡ ,ora del género humano" de la paz" da • t virtud, y de los preceptos sagrados del )ecálogo, ba:o el título y nOlOb.re de Je­

; lIS? ¡Me escandalizo y me lleno de horror : 1 ver graduar tan insolentemente en un : ais ilustrado y cristiano por milagro y ,rofecía el asesinato! ,

El señor de Fresne, embajadol' de : rancia en Venecia, escribió en r 606 una : lrta á Enrriqlle IV. y le decía que mu­:[10S padres y madres se que.i~lba:n de que :15 híjos les faltaban á la obediencia y ,!:>peto, por que los Jesuitas les d"ci:m ¡lte ~staban excomulgados; que se habia ¡:dlado copia de algunas cartas en qu@

"

f

53 ~écian al papa que ten1an en ~tts escué-1as trescientos niños de las mejores casa~l 10s cuales eran otros tantos esciavos de su, sociedad; -y que hallaba tamb,ien que en .... , tre sus preceptos á los estudla~tes -les,ell-., car-gaban de tal modo que estuvle.sen pe-r,­sU'ldidos de Que el 'Papa era gUIado poe in~piracion i~falible del Espí.ritu ~antol que todos salian en 'esa creenCIa: ya mas, -de esto 1es decian que debi-an creer á S. ~;i' aUllque dijese que lo blanco era ne~ro~; ,sopena de condenarse; y des pues sIgue i diciendo el señor de Fresne, que los Je-.: su itas han robado muchas casas, han guaro, dado copias y memorias de confesiones de! ias personas distinguidas; y. que cuatro¡, dias antes de su partida hablan quemado gran cantidad de papeles para que no fue+ len vis-to:;; averiguándose, por los qu.e n~: pudiet'on quemar, que. dlo.s . empleaba ': liIUS cQnfesonarÍ05 para InqUIrir los cau+ dales de cada uno, su geni~, y el m.odq, de vivir de todo~ los principales, temen+ doun registro particular para saber p:m-; ttialmente la fuerza militar, los medtos{ y la disposicion del estado, y de todas, las familias en particuliH!) lo cual s~ ~'e-I putaba por indigno de persona:; religIO"¡

i J

14-,~5aS, y daba indicios de que tenían' al .. .' d" , gUl' -:~ran eSJgnlo,slendo de lo contrario inú-,:tll t~n ~scrupulosa y penosa curiosidad; , : -por ultimo dice dicho sen~or d F ' Y : ' ' , . ' e resne que · i el general nada tIene. de religioso sino el l. ~opon, y que se gobIerna en todo como < ombre que funda un grande imperio; : ~ que. para r,nerecer su beneplácito es hece: '~sano sacrIficar mucho dinero. : . ,El. Dux de Veneciá habiendo sabido

:', autentlcamente que la Como ,~, ' 1 : . " pama era a ;' causa de todos los ¡hales de la ,,' bl' , . ' " , , repu Ica, ;' y 9ue. su prmclpal mtenclón era abatir y \ amquJlar la autoridad de todos 1 j , ,,'.. os reyes : y pnllclpes, dIJO altan:iente que la guerra; .¡la. peste y todos los castigos de la ira de i DIOS, serIan mas tolerables q' ue 'lo' J . . 1 t s ' eSUl-; as. ;, El parlamento de Pads en su auto á ... ¡ c~rdado de 8 de .iunio de 1610 cont ra el : ~l.br? d~l J,esuita Mélriana, de Rege et Re­;!gzs mstltutzone; condétió este libro á ser :1 quemado por mano del verdug' o' d 1 t d l. . l' " , ' e ante · , e a Ig e~la .de Pans; como lleno de mu-! chas .blas~em'ás detestables contra el rey

I Enrnque I~I.;. personas y estados de los

: re.~~s. y p,nnclpe,s ,soberano" y otras pro­· pOSiCIOneS contrarias al decreto de la Sor-

~5 '"'T

bona de S de junio de 1610 el cual dice, que es una heregía llena de impiedad, sus­tentar que es lícito á los vasallos ó extraños, bajo de cualquiera pretexto atentar, con;ra las sagradas personas ,de .los re)es ,o pnn-cipeJ ..

En 2. 3 .ele mayo ele f 761 "espid16 ,una real cédula Carlos lII. mandando .circu­lase la obra ,del P. Mos, ,intitulada in­commodaprobabilismi, impug,?-anlio, en- , tre otras, la doctrina de los Jes:uitas , del. regicidio .Y .tiranicidio; ,error ,conde?ado' i por ,el concilio general de ConstanCIa en i

14 1 S ; Y por ,otra :real .cédllla del mismo i año á consulta de! consejo deCastill& I

mando que :todo Jesuita que :tuvi~se aun, la audácia de pisar ,el suelo .espaool des-,i pues de :proscripto .incurrIese ~n la pena.' ~~ muerte si ,es lego" y á ,perpetua reclu-;, sion el ordenadoinsacris, sin ,excusa de:, ,diniision, ni libertad de ·:votosde su pro .... ¡ fesion, :con su~per.1sion de empleo y cas-,I tigo ejemplar á las ,autoridades qu~ falte~ por inteligencia ó inexactitud .al flgorosq cumplimiento de esta real brden. ;.

Por el suplemento á la circular d~ 17 67 dirigida á los diocesanos, se ven aU~1 ténticamente las pruebas de su obstinacio~

56 • de los Jesuitas repulsos 'su' ,

;:: yo fanatismo y db. dY s sequaces, éu ... :!¡ los inocentes fi u,s,o ~ la credulidad dé , , nglO mIlagro' e'

':1 y revelaciones s, pro¡eCla,~ , para conmover

: ': ner al pueblo l ,Y mante-, en a creenc d : '1 greso: en Italia em '" ' I~, e su re­¡l'fingida re 1 ' p~zarona ClIVldgar una " ve aClDo en e'lb ,-. d '

: ,manía die ,e.,a e CIerta , :J e astelo en el " <¡polltificio q " mismo estado , ,ue anunCJaba el ' ,

'1. los regulares de 1 e ,j egl eso d(} a omp'tñl"'. '

,( nos, y trasladar 'E" ~ a a estos rel-:; cíon, fraguando on aJ\IT spü,na esta alucina_

en .LV.lurCla pol' ' , "gas refinadas sus lntn-, b ' un a,se rto milagro d h' " 'el' reverdecido e a-, . una rama do t ' ¡, CIerto convento d. , l',' ... ereVJl1to ea

, e 1 e ¡glosas :; Cle pro pagaron d ' cuya espe-:: el de POrtu al por to, o ~l r~ino, y en ,1 res s·' g p~r. sus emIsarIOS y fauto.;. I . I a estas noticias 11'0 1, d'

~ ~Ol' el mer'ecI'do' 'd' as lese el lec-cre Ito 1 l' ¡~"ea ' e sup ICO oue

: para su convencimien~ l' 1 i;~xpidió el e " l,O a cIrcular CJlle •. ' ,'" onseJo real a los ord" , ,"<.:¡e.)la~tICoS y sup . ¡nanos

ne Octubl"e de 166 erIores re~ulares en 23 I~ . , 7 que empIeza así' rr El t "OIHejO temelldo presentes varios docu' os reservadó. 1 me/)­

¡'al s, y o expuesto por los dos jis-: es ell YlIZOI~ de las pretendidas .r.', ¡ revelaciones funáticas d ¡ proJ e,Ctas, ! ~sacerw dt:l re·' e a gUllas re/¡gio .. ; greJO de los regr¡la.es de lti

11

I

·1 ¡

57 Comp¡;¡Tria, y de las especies sedíciosas qu~ han saiido de sus claustros, ha reconocid(J que todo este fermento nace del abuso de al­gunos de sus directores espirit'uales, seqtla .... ces de las mtíxímas y doctrinas de los regu ... lares explllsol: esta profanacion 110 solo pe-r-- ' ttlrva la tranquilidad de las m,ismas religio- . sas, dividiéndolas en partidos, y rnezclán"" dolas en negoCÍ'(js d.:l f!:obiertio, del todo im­propios de la debilidad de su SliXO , y dd ri­tiro de la profesioll monástica; sino que es' im medio astuto parel divulgar en el público i

ideas contrarias á la tranquilidad; pues na.- i

die fácilmente se persuade, á 110 estar evi .. ! uentemente ciem'05tmdo, que unos ministros I

evangélicos propagllen la sedicion eH 5t15 pe­r¡itel1tes e01l p'rete~to de dirigir las c(mei,en~!! óas t9'c" ~c.

En fin, tendria que llenar muchas pá" ginas si hubiese solo de citar los 1 !l!1ume-

1

rables exce,os de los Jesuita~, y de 10Sl

muchos daños qüe han ocasionado al mun~! do., tta~tornanJo gobiernos, apoderando..l: se de bienes inmenso~., y habi\!odo ya lle J

gado su dominio á tal extremo que ni eu política ni en religiotl prevalecia I.11;iS qu,1 Stl vdunta.1, á la que llamab,m ~Ol1se,io; El que fuere Clir1G:;O en e~t;¡, lilat-eri'a qut'

58 1ea la obra de Suarez, Jesuita, titulada.

" Defwsio fidei cathoficlZ et apostoliclZ adver­sus AlIglicanlZ sect~ errores; los escritos de J3ecáno, Azór, Bonarscio; Richiol11e, Be­

, lomontano, Lessio; Grettero, y el libro , de lacobo Kalero titulado tinllJicidit¡m,

1: Seu Scitum Catholitorwn de tirallí illtenu:cio_ ;' 'le, y otros lTIuchos que han escrito los le­:: suira~ ~prob,ados por sus teólogos

p y verán

i, mis lectores las m,íximas políticas y reJi .... I giosás de estos regulares. Ellos se l11ultipli­

:; caton y sustentaron con los peqdos del , pueblo: Se€scandalizaban quando se les

;' llamaba Iñiguistas; Loyolistas, ó Ignacia ... ¡"nos: vivietott coliJO si no tuvieran ver­:'guenza, honór ni religión: inventaron nu,e­"vos medios de hacer mal: se dedi.caron á ¡ll impugnar á los doctores de la verdad: fue-:­:lItan hipócritas, embidiosos, y enemigos de :Qlas demas religiones ~ fabulistas del lapon, Ide l:l China y otras partes: usurpadores <le io~ bienes <le innul1ler~!bles fan,1Ílias, tuvierOri vida delicada yse[l3ual; pues no tenirtn maitines, vigilhs, ni mas ayunos que los seculares; (!all1tsas de lino fino, buenas camas y excelentes vinos, ~in obli­garles las austeridades de los del11as reli­~iosos; devotos falsos llenos de embidia y

",

,J ,~

. . y en . b s en aparlenCla, , trnU\aCIOn, po re d'r:., ltei> soberbIos; . . men IC<l[ realidad ricos,. f iendo: docto-

dlan o rec d hombres que pe 'tes. ,mártires e-'é iu.constan. " •

tes ltgeros , . ""1 5'05 ,deO'a, nan e S ,cOulC O . >O ,

licados ::con lesore "b' ',. llenos de amor .. h' 'ld"s ,saber ,lOS, ,',' •

'Cla :: utnl:e '" d indulgen,c¡,as, , d t: rnet"Clantes e a" JI~ del mun o: o' , , ar sus como toa--. ,', ara ,procur. , v' d' '.-mdustnosos P , .l', rdlas' merca e

a., , dóres de ulSCD , . , d.es:: senl'ura. ,,', fi esoplUlon

• 'd ,bie1"ta~ 'en n " res de tlcn 21. a á " 'ta'blecimientoas-

I ' des esu ,es g' enera que , ul'a universal, y que . , , l' Monarq , , Plr,aron a ' a d "d mucho SI sus

.. h biera pa eCI o ' , la reltglOn u ,,' " ',1' idó por mas I

hubiesen preva ee , ináxil~as

tiempo. ,. áe Maclriá se resis- , El ayuntam,lento 1 Jesuitas hicie- !

tió á l:a IundaclOn que os rte en el afio, I n esta co ron de eséue ase '. u"" éstable-, . do queela L.

de 1 572eXp?n1~~, 1, represehtando vi-! cimiento perjlldlcla , ~, tes, y diciendo¡

i convemen, , vamente sus, n , fi e el de enrrl-!

l b otrO 11 qu q ue no leva an . d sug' etos y con 1 Ieee Ion e

quecerse con a e , d' ficultad la ven-, 't· . pero esta I

sus legl unas" , '1'" s éori las ven-, , ~'d los regu al e I

ció la mana e 1 ontribu\'ente~ a d l' b r hec 10 e ., tajO as e la e ,. o A. ,'unta" ,,' y allrtlsm ¿ J

Rey, sús COhse~os" 1 obra q:.te em' miento contradIctor par'a l

60

,! prendi~ron en .15-96, en la que 'les qúedá ., gananCIa. El tiempo ha justificado la j'llS

ta o ," d ""' 50S pOSIClon e aguellos capituJares celo ... , ,pu~s por haber C\lnfiado la enseñan .. . za publIca á los Jesultas fue la ,c' . f'. tal del bu' ,.poca a­E.. en gusto de la erudlC'lOn para

3paña: esta se perdió por la extra va .... ~ante adopcion literaria de aquellos maes­~ros, gue apoderados de las letras, singu­

I barmente las proemiales, coh que se de ... d en pre?ar~r los jóvenes para el -:studío

e las CIenCIas stlp:er.iore,¡~ cen'aron ente-I'amente la puer't . 1 b' , .. él para nue ni ¡ese mae"-

, tros h 'b'l "l " L', a I es entre los seculares; pues a ... ~. ?uelJas escuelas, caritativas en la opinion . ue los que· 1· , 1 ,l' • " . SO? mIran as cosas por la su-~ bP,~diC'le '. arrumaron las cátedras dd pú,. < lleo él' ~ '1' 'j .. ' mposlDl ¡taron á 10s hombres ds iJhl~mo en el sigli:> de 'tener su establecí­ilin¡ento y susistencia, Nunca les faltó ~í los legulares de la. Compañía habilidad para ~ograr las dotacwnes de aqud las cd-redras' ;tY cua?do habia alguno, que por su des~ ~ e n.dItnien,to. de íos fines ,humanos por lo.. v ida rellglOsa, tenia el descLI ido de e­~,u .ar el método de su,s estudios de ed _ 'ogl . U ~ac,on ¿que competencia les podria ba-

¡un seglar, a uuque fues,e dd G!.ériro

6r mas sobl"e~alie!1te, delante de un vulgo que la hélbia ds jt:zgar por la modestia, y por el porte cxtérior eu que e,s natural que sobresalgan los que han dejado elite­ramente e I mundo para serv irá Dios? La sentencia era preciso fuese siempre á fa­'Vor de lo~ regulares, y así e:> que duran­te su imperio todos los jóvenc:> fueron dis­cípulos de los Jesuitas, porque en ell?5 solos llegaron á creer los padres de faml­lia que residian la ciencia y la virtud; en términos que la España era una nacíon de Jesuitas á la épo~a en que sus máxi­mas pudieron dominar en aquella gene­racion que habia sido criada con sus pri~­cipios ..

Confieso que la obra de enseñar á nuestros tiernos hermanos pobres y des .... validos, los rudimentos para las artes, y las ciertcias, es la mas excelente entre ro­d:¡s las piadosas; ninguna hay que igua­le á la inestimable de crear ciudadanos 'Virtuosos, capaces de servir útilmente á Dios, al Rey y á la pátria, pero este ¡os-. tituto es peculiarmente propio del prínci­pe, que como padre d~ la nacion, 110 ~olo no puede fiar j,t ilTI?Grtancia de e'ite asun­to ;¡I CUil{.t,{O particular, sino que por el

·1·

. ': .!

bien ~e sus súbditos" pOI' la quietud' qe sus remos, y por su misma seguridad, ~s." tá precisado á poner límit.es á estos regLJ..,. Jares, y c;onfiar la educaclOn á las escue-1a~ y universid'!.des, eligiendo los mejor~~ autores que hubiere en todas facultades, y bajo, un plall de esrudio~. La educacion se ha mirado en todos ti~mpos como el :t:unto prec;is.o y mas. es~ncialen que COn­SIste lél felIcidad de las naciones, y nin_ guq gobi~rno sábio puede prescindir de ~stª materia tan ¡m portante. .

Ninguno puede' negal' que al mismQ> cargo de la enseñanza de la juventud, es­tá unido el dominio de las vQI¡,.tntades del público, el re'peto del discipulo <i su maes~

1; tro, y el natur,1J deseQ de 'los padres. por 1,' los adelantamientos de sus hi.:os; y esto ¡:j es Jo que les sometía ~l yugo ,Je los. Je­,;j ~;uitas, en términos que este ~uerpo pode-o ,j roso, era. el que mandaba en rodas las ha­~ ciendas y voluntades. Las riquezas dl~ la ~ Compañía, ~u iniluencia,. su f~natico en­er greil1lie,l~to, y su absuluré! dominacio n que

tanto dIO que hacer ;,Í la Europa, no tu-,1 VA otro principio que el dl' haberse apo­

derado de la enseñanza de la niñez: siq esto á buen seguro que hubieran sido me ..

'¡

63 nore¡¡ sus conquistas, y sus mhimas m~­nos dichosas: El Púlpito y el Confesonario les pudieran grangear algunos afectos, co­mo á las demas religiones pero el punt~ de general estimacion en, qu~ llegaron a verse fue ciertamente efecto puro de la. dep~ndenciá en que pusier?n sus es~uelas y seminarios á toda la penln~ul~. . •

Aun pasaría adelante mI d Igr~~IP~ SI

no tuviera por la mayor de las ocws¡da. , des persu<!.dir un desengaño ?omun al i

mundo: La historia de los JesUltfls puede i

estlidiarse muy bien, por los pocos que la I ignoren, en los muchos au~o:es qU,e han 1 escrito sobre 1<J. materia. M~ lnten~lOn en i

dar al público esta memod<\. no es. ot~a !

que la de renovar la ¡de a de lo perJudl- : cíal que ha sido á todos los estados y re- , ligiones la Compañ~a titul~da de Jesus; .de ! l€lS justos moüvos que tilVlerpn ?a~a extw· I güirla Clemente XIV. y 9ue eXIstIendo las! mismas causas no ha debIdo restablecerse,. ni menos permitirse en España, cual:do la sobran frayles, y la faltan rentas: BIen administrildas las que son de la Compa­fi.ía pueden atender á muchas ~~cesidadesl del E~tado, Ó invcrtirse en el unl estable·

1 ~imiento d.e una U lliver~idad que falta ea.

64 ,: Madrid, y ;:¡lgunos. Ho~picios elevad'os 4

fábricas en las provincias. No ignoro en quanto á lo primero que algunos están mal I;on los establecimientos de estudios dentro de las grandes poblaciones creyen..,. do que el allstero genio de las ciencias, no de,;cl1 bre sus gracias, si no es oí. IQs ha bi..,. tante, de los desierto,>; pero es muy facil convencer de su prevencion á esta gente con el ejemplar de millares de hombre$ insignes en todas letras, que las apren,.. dieron en 11 n iversidades situadas e,n ciuda­des muy populosas, y contraerles <J la me ... maria que el gEntio de Atenas ni sus tea.,. tras nunca impidieron los progresos de la academia, y que la gran Roma crió en.,. tre sus es.pectáculos y convites los juris.,. consultos , poetas y oradores q~!e seui.,..

;j' TAn de perpetuo modelo al g~nero huma7 l no: la conservacion de las universidades 4i ,antiguas es la causa de no haberse podi: ~ ,do establecer otras modernas: es decír, ~ c.¡ue ~iempre se ha impngnado el poneda (1 len la corte, porque si <! los naturales de l' ~adrid se les concedia la comorlidad de

:estudiar sin salil" de sus ca~as, se priva~ ( e " "1' '1 . ha ~i bs otras UllIVerS!( aCles y a as CIU.,.

eqq~es de liU estabteciroiento de la. fiar drt

i

6) prOfe~Ol"es ricos que van á consumir á e .. lIas sus rentas.

T

Lo cierto es que no hay paraje del reino donde se pueda contar un número

igual de hijos de hombr~s. de bi,~~,.~teni~ do . .; á un corto sueldo, e llnpO~!Ol'¡lados de darles fuera de sus familias la¡¡ asis"", rencias necesarias para la cal'rer(i de las. letras ó las armas á que les destina su na., cimiento, y no solo en esta clase de gen.,. tes que merece atencion se d.eben espe~"ar: virtuosos y aplic~dos estudl3.ntes , SJOO

que 5Íempre será mayor el aprov.echa-, miento aun en aquellos de casas, ricas y I opulentas, si estudiasen á la vista de sus I

padres. Las distracciones de la comedia,.! del paseo ó del bullicio nunca podrán : hacer en la juventud el estrago que la· licenciosa emancipacion de.! jóven que se! envía á una universidad distante, sin mas I fianza Aue la de su buen natural, espuesto! á ser la victima del ócio ó del mal egemplo.·

Fórmese una universidad en la Cor­te, y favorézcasela de modo que llegue' á estar en un pie floreciente, y será en-· ronces uno de los principales ornamen-I tos de Madrid, produciendo en todas las I órdenes del e~tado los provechosus ef'e<:=-

S

66 tos que debe e~perar la Nacion de -tan. grande obra, estableciendo un buen re­gímen, la lectura de estudios útiles, y la. elecciQn de buenos maestros. . Los Jesuitas hicieron á la-Magestadde

Felipe IV. en 1 618 " la oólig.acion de en­señar en sus escuelas las artes y ciencias que S. M. quiso y mandú seemeña-;en en Madrid; mas los Padres de la Compañía no cumplieron fielmente· el empeño que hicieron COn el Soberano, pues capitula­ron la enseñanza de las lenguas latina, griega, ebrea y siriaca, retórica, mate­máticas, historia sagrada y profana, polí­tica, arte de' la guerra, erudicion, tiioso­fia y teolog.ía escolástica moral, y expo-

. si ti va, repartido todo en veinte y tres cá­tedras con otros tantos maestros; per<t ajustada la cuenta por las que tuvieron de las que debieron tener, se vió que no hicieron mas que añadir á los pr.imeros ,estudios de su instituto al15un maestro en el nombre para' disfrutar las rentas con que S. M. habia dotado tan insigne y uti­'lísima fundacion, fustrando los' ]e:mitas I ¡sus re ... les intenciones y los adelantamien. tos de la nacion. !En el dia se podian reducir las veinte

67 'Y tres catédras al número necesario sola­mente para enseñar las ciencias útiles y fructuosas, en cuya eleccion ninguno pue­de embarazarse en .el ,día .de hoy, pues el gusto é ilustracion del siglo ha conde­nado yahace .años á varias mate,riasó au­torespor inútiles.é infructíferos.

Dos catéd-r:as de lengua latina, una. ele lengua gr.iega, :otra ,de lengua francesa en lugar de las ,ebrea, .caldea y s.iria; otra ;de retórica para {!omunicar á l~s jóvenes; el tesoro de la ;Iengua ,española., :fa .ener,.. i

gia ypu re1.a ,de .sus yoces, .y ;qu,: ,la ,h~b1en ¡

en su estructu~a ,natural, sIn pa.lt7a;tú em- I 'barazo de .mate,R)átkas,orrade ,dibujo :pa· I

ra que sepan for,marcur,iosos ma,p21.s, pta- !

,!les y ,diseño!>; otra ,de historia natural pa- !

.ra que apr,elldan .los ,elementos .del.sistema mas célebre yaplau,Q.'ido" in~tru.yéndo'os del conocimiento de las plantas.; an'ima- !

les, y minerales que se crian y habitan nuestro .suelo y los reinos .de . Améric~; otra defilosofiaexperim~ ntal, 'ba;o ;la .doc­trina de Neuton por sus comentadores;

. otra de química; estudiando ,el célebre Olaridés Boerhave ú otro, cuyo ,estable­cimiento es no solo útil, sino muy nece- I

sarlo para formar buenoli boticarios; en I

6S quiénes están depositadas las vidas de los h.ombres; otra en que se aprenda la histo­ria de la nacion; otra de éctica para que conozcan al hombre y sus pasiones, y se­pan arreglar y ordenar sus costumbres, á fin de ser útiles á la pátria, al monarca. y á. sí mismos, arn:glándose á la Consri ... tuclOn del Estado, como buenos ciudada­nos; y por último otr~ cátedra de teología moral, en qu~ se expl!~ue las obligaciones <le la ley dIVIDa, contorme á la doctrina canónica, y de los santos padres sin ca ... vilac~ones., sutilezas ni opiniones' ¡:elaja~ <las o pelIgrosas.

T od~s estas cátedras v ienen á com po­ner e~ numero de catorce, que ~iendo de estudlOs provechosbimos, bastarian á dis­P?ner. el áni.mo de Jos jóvenes para las cle~clas sublltues, á que quieren des pues aplIcarse, y para el conocimiento de las mecánicas tan útiles, á la vida humana , de .n~allera que sobresalirian y se distin­gUlrlan de los profesores que careciesen de estos principios; fuera del estudio de

, lenguas y de los demas que por si hacen' profesion, se podian formar excelentes .a:tesa~lOS en la platería, relojería, car-

11 ptntena &c. con ,el conocimiento de las

tj~

~'átemát¡cas, é igu.almente cétebre,s ?in .. , tores, arquitectos Y eseultores; . y ultima .. - .. "nente la historia natural y fislca expen­:mental producirian sábios y j~i~iosos. m~-: rlicos, así como veríamos gravIslm~s JU'[!~- k -consultas y jueces de talent? ':! de mtegn­dad con la pureza neces~na de ~stum-. bres, que harian la glona del reino y d, !Servicio del rey, no CGmo se ha hecho,. sino como debe hacerse. . •

La eficacia del premio descubrirla! hombres hábiles para desempefiar esta~ cátedras á satisf:r.ccion del gobierno, pues, el interés es solo el que tiene á la virtud :de sacar á los humanos de aquella ociosa inacdon á que secretamente le llama h uaturaleza y <le hact:rles emprender la! '()cu paciones mas penosas si le a yuda~1 lo: <los encantos de la gloria y de la eswn.a­cion; y gracias á nuestros ilustrados dla! no faltan sugetos á quÍlmes n,o se. h~ye el !ao; dendas alg\lOO de los conOCll~1Iento~ de que se pueden preciar los sáblOs ex

trangeros. . ' Esta idea sencilla nO es ImpraCtLca

ble, y al Lni~mo tiempo no habd quie fDe niegue io útil que sería el ~en.er un ~niversidad en la Corte: hay edtficio don

7° de establecerla, y aun en el mismo po ... dría proporcionarse ,á todos Los catedrá­ticos ,una ,cómoda habi:tiicion, ,asi como á Jos 'porteros, ,bedeles y .moz~s ne.c~sari05 i in,excusables para:eL ,aseo y ,asistencia.

-Igualmente ,deb,etia ponerse otra cá­tedra para ;explicar los muchos ,códigos; y sin sacrifh::ioalguno podria eLgobicrno ,sostener ,este ,eitablecimiento en la corte; pues para dotar todas las cátedras ..decen­temente, ,aunque ,algunas.tuviesen diez y ocho ,l'nil reales ,de dotadon, habia Jo bas­tante paracu~~ir este gasto, ~olamente con las rentas que tiene el Colegio Impe­rial de Madrid, ,cumplidas sus cargas; quedando de este ;modo tambien cumplida la voLuntad de ,los fundadores, ,cual fue la deestablecet las cátedras que quedan indicadas, sin mas ,di(eriencia que la de mudar de ,lnanos, facúltadea y autores, legun lo ,exigen las circunstan.cias é ,i1us­tracion ,dd 'siglO en que ':v iy,i ¡n os , ,como ~n las mismas lo habriandispuesto los nismos fundador,es.

Hay ~apacidad sobrad:;l ;en el mismo :dificio par,a formar su correspondiente ',ibliote;Ca de los autores mas escogidos ,e todas las ciencias que se en~eñen, así lomo tambien para colocar un museo,

71' moneta.rio,. instrumentos de fisica, y de­mas que el gobierno cont'emple necesario, como es un elaboratori0 químico para ha­cer toda clase de pruebas, re4uciendo á la práctica todaS' ~as teorias.,

La ejecuciori de' este peas;¡miento nQ tierie' inc'onvenientes ni dificultades: Re­side privativamen~e en el Congreso nacio­nal en el dia la facultad de p'erfeccionar esta obra sin mezcla ni· intervencion de la potestad eclesiástica, sin que haya ne­cesidad de entrar' en la question sobre fi­jar los verdaderos límites de las potesta­des, pues desde luego la nacion y su rey pueden disponer' 4e los bienes' de lé4s fun .... daciones en uso de la jurisd;iccion reserva­da: en la sentencia: del patronato Impe­rial que nunca se ha redamado~

De todos modos, cuando no merezca estÍmarse este pensamh:nro, al menos de­be anularse el decreto de restauracion de la Compañía, pues sería una monstruosi­dad inaudita el ver entre hombres libres é ilustrados ti los Jesuitas, que si sabían, 10 guardaban para los individuos de su religion, y solo demostraban al pueblo quimeras y fantasmas para sostener su dominio y fomentada supersticion.

7" Ya no existen enel imperio RQso, pues.

el sábio Alejandro ac;:aba de lanzar un de­creto para arrojarlos segunda vez de sus do­minios y parece se ha efectuado ya la estra­fiacion. España, Esp<>.ña solo es el pais don_ de viven aun en comunidad los Jesuitas, y 'le no <.?ambiar el sistt!ma, hubieran COIl su política particular es.tClldido muy pronto ~\l antigua dominaciou.

La Compañía de Jesus en el dia no tie­ne sino un curto número de hom'bres de a. él'~ellos antiguos Jesuitas; y estos son octo­senaríos y centenarios que no tienen ya par~ D~da disposicion, mas que para pensar eu, :Píos ~ viendo acercarse el momento de dejar t;ste mundo para ir á la eteqüdad; No pue­den ni deben estar gustosos en comunidad, y rodeados siempre de cuidados temporales que les privan de ocuparse únicamepte e~ implorar la miseri<;ordia de Dios, y no pen- '~: sar mas que en su, salvaciol1; por lo que ro­~ibirian un beneficio, cual les conviene, si él gobierno los sec'u~arizase señalándole$ para cone! uir sus (:lia~ cówodamente una¡ moderada pension; esto es á los sacerdotes~ pues con los que no lo fueren no habia otro sacrificio que hacer que el de dar á cada uno, un pas}pm:t,e para incorporarse con su fami-lia y/ser útil al estado con otra profesion. pues el hOl.nbie que come y no trabaja es una, carga en 'fa sqciedad, porque de cualq uiera modoque se<v él ha de sustentarse con sus prodllc.ci.ol;5:S, y estas no se reproducen sinq ~ fLlcrz.1cac bra.zos labodosos.

lo .

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