La Ley del Karma

El ser humano est determinado por sus acciones, alimentando sus apegos sobre apegos inclusive, se apega a lo material y lo inmaterial codicia, se aferra a sus ideas y pensamientos y a sus agregados.

Cada uno puede hacer de su mundo interior un paraso o un cautiverio, y aprovechar la vida para cultivar y alcanzar el Reino de los Cielos o atrasarla indefinidamente y seguir viviendo en estado de ansiedad.

Cada accin hallar irremisiblemente su reaccin, cada acto su efecto. Nada se pierde. Todo acto, todo pensamiento, toda palabra tiene efecto sobre nosotros mismos.

Buenas acciones, buenos pensamientos, buenas palabras; pero si egotismo, sin autorreferencia, sin soberbia, sin orgullo, sin vanagloria o presuncin. En pocas palabras: sin apego.

Somos el producto de nuestras acciones pasadas y seremos el producto de nuestras acciones presentes. A nosotros nos corresponde elegir lo que queremos para nuestra vida. Paz o sufrimiento.

Actuar lo mejor que sea posible, pero como si no se actuase, sin que el ego se interponga, sin accin egosta.

NOS LIBERAMOS NOSOTROS MISMOS, NADIE NOS LIBERA

Una causa meritoria origina un buen efecto; una causa o acto negativo desencadena un efecto de iguales caractersticas. Como sean las causas sern los resultados, porque en toda causa est ya en si misma el resultado.

Todo est en nuestras manos, el esfuerzo para la liberacin es necesario, imprescindible. No se puede hablar de fatalismo o predestinacin.

Yo: El Padre es nuestro Yo liberado de todo condicionamiento y apego. Es perfecto y puro y su residencia es el Reino de los Cielos.El Padre es la mejor versin de nosotros mismos. Libres de apegos y condicionamientos mentales. Perfectos y puros. Viviendo en el Reino de los cielos, que es un estado mental de paz y plenitud pues, estamos en el mundo pero ya no somos ms del mundo.

SOMOS COMO NOS HICIMOS. SEREMOS COMO NOS HAGAMOS. NADIE ENCENDER LA LMPARA POR NOSOTROS (A los sumo nos indicarn cmo hacerlo), PERO NOSOTROS ESTAMOS CAPACITADOS PARA ENCENDER NUESTRA PROPIA LMPARA INTERIOR.

La vida nos ofrece la preciosa oportunidad de ir remodelando nuestra mente, de sembrar y cosechar, de ir cortando los grilletes que nos encadenan.

Hay que desarrollar nuestra sabidura y no dejarnos engaar por lo relativamente permanente, no dejarnos envolver por el embriagador canto de las sirenas.

Ignorantes, rebosantes de apego, perdidos en especulaciones, engaados por la apariencias, empantanados en la incertidumbre, generando odio sobre odio, autoidlatras, empedernidos, vidos de existencia fenomnica, mrbidamente dependientes de todo y de nosotros mismos. Acumulamos tanto en nuestra mente que difcilmente creemos sinceramente que hay una vida mejor. Atribuimos todo a factores externos.

Aqul que se ha liberado de todos los venenos de la mente. VIVE EN EL DESAPASIONAMIENTO, pues ha QUEMADO TODOS SUS IMPULSOS.

El camino por recorrer es largo y duro pero es el ms grande significado que se le puede dar a la existencia.

El primer paso es resolverse a a seguir el camino que conduce hacia el Nirvana Reino de los Cielos.

Yo: Es el camino ms difcil que se puede recorrer. Es el camino del filo de la navaja que implica mucho esfuerzo, tenacidad, coraje, periodos de amargura, tristeza y soledad Aunque son ilusorias por el hecho de que nuestra consciencia se va desarrollando y alejando de nuestros pares e incluso de nuestros seres queridos.

La Meditacin Budista. Ramiro Calle 17