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24 Diario de Navarra Martes, 4 de diciembre de 2012 Pamplona y la Cuenca IGNACIO MURILLO Pamplona J AVIER Ciga Echandi nació en Pamplona el 25 de noviembre de 1877, justo hace ahora 135 años. Fue la ciudad en la que vio la luz y en la que falleció el 13 de enero de 1960. Pintor de exten- sa obra y profusa biografía, man- tuvo una relación especial con Elizondo y quedó ligado al Baztan de manera pictórica y afectiva. Así lo relata el profesor Pello Fer- nández Oyaregui, que ha editado recientemente una extensa pu- blicación sobre la vida del pintor y toda su obra, fruto de varios años de investigación. “Javier Ci- ga era muy pamplonés y muy na- varro. Sin duda es uno de los exponentes de la pintura en Na- varra y el mejor retratista. Sus cuadros aportan un gran trasfon- do humano, con lecturas de la cultura y la forma de vida de la época”, analiza Fernández Oya- regui. El pintor tiene calle en Pamplona, en el barrio de Iturra- ma, junto a otros pintores de la época, como Basiano, Crispín o el que fue su maestro, García Asarta. Concejal en Pamplona El libro relata de manera minu- ciosa la trayectoria personal y profesional de Ciga, con valiosas aportaciones documentales, ar- chivos periodísticos y un catálo- go que ronda las 700 obras, aun- que no de todas se tiene constan- cia por pérdidas. Javier Ciga se formó artística- mente en Madrid y en París en- Cuatro cuadros representativos de Javier Ciga. De arriba a abajo: ‘El mercado de Elizondo’ (1914, Ayuntamiento de Pamplona); ‘Un viático en el Baztan’ (1917, Museo de Navarra); ‘Mujeres Agotes’ (años 40, Colección particular). En vertical, el cuadro ‘Retrato de mi mujer’ (Eulalia Ariztia). 1917, Fundación Ciga. Depósito Colección Ciga. Elizondo. ARCHIVO A los 135 años de su nacimiento, un libro de Pello Fernández Oyaregui se adentra en la biografía y obra del pintor pamplonés I.M.M. Pamplona Pello Fernández Oyaregui, de 54 años y natural de Elizondo, es ca- tedrático de Enseñanza Secunda- ria y profesor de Historia del Arte en el Instituto Alaiz de Barañáin. Es secretario de la Fundación Ja- vier Ciga y autor del libro recien- temente publicado. “Siempre he tenido relación con la familia Ci- ga, que siempre quiso que la obra fuera patrimonio de Navarra. Se decidió crear la fundación y me fui metiendo. Entendí que era ne- cesario renovar el catálogo des- pués de una década estudiando el asunto y hemos doblado las obras de la primera monografía sobre Ciga que hizo en su momento Carmen Alegría”, relata Fernán- dez Oyaregui sobre el origen de la publicación. “La Fundación Javier Ciga con- trola unas 110 obras, pero existi- rán unas 700 suyas, muchas per- didas. hay muchas lagunas. Por ejemplo, hasta 1907, cuando Ciga tiene ya 30 años, no tenemos na- da. No conocemos su evolución inicial en la etapa de aprendizaje”, lamenta el profesor sobre dece- nas de obras que no se han con- servado del pintor pamplonés. Fernández Oyaregui no ha concluido con el libro su investi- gación sobre el autor, del que ha encontrado más datos y obras. Remarca, por ejemplo, un último descubrimiento: “Su infancia quedó marcada por la muerte de sus cuatro hermanos. Juan, Mar- cos y Gregorio fallecieron a las pocas horas de nacer o en los días posteriores, mientras que Euge- nio falleció a los 18 años (1889). Además perdió a su madre con 12. La muerte le marcó, por eso luego la familia que él crea es su verda- dero punto de agarre. Es tremen- damente familiar”, mantiene el profesor. Fernández Oyaregui explica que , junto a la biografía y el análi- pintor de Pamplona PELLO FERNÁNDEZ OYAREGUI AUTOR DEL LIBRO SOBRE JAVIER CIGA “No conocemos al Ciga inicial en su aprendizaje” El profesor Pello Fernández Oyaregui, con un ejemplar del libro. CORDOVILLA Ciga, Ciga,

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24 Diario de Navarra Martes, 4 de diciembre de 2012Pamplona y la Cuenca

IGNACIO MURILLOPamplona

J AVIER Ciga Echandinació en Pamplona el25 de noviembre de1877, justo hace ahora

135 años. Fue la ciudad en la quevio la luz y en la que falleció el 13de enero de 1960. Pintor de exten-sa obra y profusa biografía, man-tuvo una relación especial conElizondo y quedó ligado al Baztande manera pictórica y afectiva.Así lo relata el profesor Pello Fer-nández Oyaregui, que ha editadorecientemente una extensa pu-blicación sobre la vida del pintory toda su obra, fruto de variosaños de investigación. “Javier Ci-ga era muy pamplonés y muy na-varro. Sin duda es uno de losexponentes de la pintura en Na-varra y el mejor retratista. Suscuadros aportan un gran trasfon-do humano, con lecturas de lacultura y la forma de vida de laépoca”, analiza Fernández Oya-regui. El pintor tiene calle enPamplona, en el barrio de Iturra-ma, junto a otros pintores de laépoca, como Basiano, Crispín oel que fue su maestro, GarcíaAsarta.

Concejal en PamplonaEl libro relata de manera minu-ciosa la trayectoria personal yprofesional de Ciga, con valiosasaportaciones documentales, ar-chivos periodísticos y un catálo-go que ronda las 700 obras, aun-que no de todas se tiene constan-cia por pérdidas.

Javier Ciga se formó artística-mente en Madrid y en París en-

Cuatro cuadros representativos de Javier Ciga. De arriba a abajo: ‘El mercado de Elizondo’ (1914, Ayuntamiento de Pamplona); ‘Un viático en elBaztan’ (1917, Museo de Navarra); ‘Mujeres Agotes’ (años 40, Colección particular). En vertical, el cuadro ‘Retrato de mi mujer’ (Eulalia Ariztia).1917, Fundación Ciga. Depósito Colección Ciga. Elizondo. ARCHIVO

A los 135 años de sunacimiento, un librode Pello FernándezOyaregui se adentraen la biografía y obradel pintor pamplonés

I.M.M. Pamplona

Pello Fernández Oyaregui, de 54años y natural de Elizondo, es ca-tedrático de Enseñanza Secunda-ria y profesor de Historia del Arteen el Instituto Alaiz de Barañáin.Es secretario de la Fundación Ja-vier Ciga y autor del libro recien-temente publicado. “Siempre hetenido relación con la familia Ci-ga, que siempre quiso que la obrafuera patrimonio de Navarra. Sedecidió crear la fundación y mefui metiendo. Entendí que era ne-cesario renovar el catálogo des-pués de una década estudiando elasunto y hemos doblado las obras

de la primera monografía sobreCiga que hizo en su momentoCarmen Alegría”, relata Fernán-dez Oyaregui sobre el origen de lapublicación.

“La Fundación Javier Ciga con-trola unas 110 obras, pero existi-rán unas 700 suyas, muchas per-didas. hay muchas lagunas. Porejemplo, hasta 1907, cuando Cigatiene ya 30 años, no tenemos na-da. No conocemos su evolucióninicialenlaetapadeaprendizaje”,lamenta el profesor sobre dece-nas de obras que no se han con-servado del pintor pamplonés.

Fernández Oyaregui no haconcluido con el libro su investi-

gación sobre el autor, del que haencontrado más datos y obras.Remarca, por ejemplo, un últimodescubrimiento: “Su infanciaquedó marcada por la muerte desus cuatro hermanos. Juan, Mar-cos y Gregorio fallecieron a laspocas horas de nacer o en los díasposteriores, mientras que Euge-nio falleció a los 18 años (1889).Ademásperdióasumadrecon12.Lamuertelemarcó,poresoluegola familia que él crea es su verda-dero punto de agarre. Es tremen-damente familiar”, mantiene elprofesor.

Fernández Oyaregui explicaque , junto a la biografía y el análi-

pintor dePamplona

PELLO FERNÁNDEZ OYAREGUI AUTOR DEL LIBRO SOBRE JAVIER CIGA

“No conocemos al Ciga inicial en su aprendizaje”

El profesor Pello Fernández Oyaregui, con un ejemplar del libro. CORDOVILLA

Ciga,Ciga,