08_01_perriconi

Upload: ninoshka-godoy

Post on 01-Mar-2018

216 views

Category:

Documents


0 download

TRANSCRIPT

  • 7/25/2019 08_01_Perriconi

    1/3

    Una alternativa de aprendizaje: los talleres literarios

    Graciela Perriconi*

    El sistema educativo se ha valido de numerosos recursos, mtodos ypropuestas para tratar de alcanzar un grado ms calificado de aprendizaje dela lengua y de la literatura. Entre los primeros y los ltimos, en el centro deinters de nuestros das, est la modalidad del taller. El maestro Iglesias, lashermanas Cosettini, los talleres de la SADE, los grandes poetas y escritoresque agruparon a su alrededor a jvenes con inquietudes de crecer en suabordaje a la literatura, todos, fueron generando una forma de trabajo par-ticular en nuestro pas que probablemente sea semejante a otras formas enpases hermanos. Nos referimos al trabajo democrtico por lo que tiene departicipativo y comprometido, comunitario, compartido y ldico que se lleva acabo en pequeos grupos sobre la palabra o sobre un texto escrito de carcter

    esttico.

    El taller que se ha tornado una "experiencia original" para algunos porlo selectivo que errneamente parece encerrar o bien por lo correctivo yteraputico que tambin posee en algunos encuadres, tiende a internalizarsecomo forma cotidiana de trabajo. Lo importante del cambio radica en laposibilidad de que el taller se integre en las actividades curriculares que sedesarrollan en todas las escuelas del pas, no slo en las privadas o en algunaspblicas con un cierto tono de originalidad, sino que se integre como unamanera especfica de entablar vnculos profesionales que permitan mayorparticipacin, por lo tanto un mejor nivel de integracin en el trabajo.

    Ahora bien qu es un taller y por qu le dedicamos un espacio dereflexin? El taller es una experiencia de trabajo colectivo que tiene un funda-mento lingstico-literario y una cierta progresividad en el tratamiento de lostemas. Es un lugar donde se puede reivindicar la libertad aprendiendo adisfrutar de las palabras. Se puede experimentar el placer de convertir loconvencional en una obra creativa, invirtiendo el orden lgico de las palabras,jugando con los sonidos, penetrando en la sustancia verosmil de lo literario,siempre distante de la realidad que intenta obstinadamente reproducir.

    El taller es un lugar para escribir, escribir implica necesariamente

    pensar, por lo tanto no es ajeno al campo cognoscitivo; se produce unaejercitacin de las reas intelectuales, sociales y afectivas de la conducta hu-mana que tiende a lograr un hombre ms libre en su pensamiento y mssensible en su manera de insertarse en el mundo. Es importante dedicarleatencin al modo como se entablan nuevos contactos entre los integrantes deltaller, pues afianza lo personal de pensar, sentir, escribir o hablar. El taller dapermisos, pero no es permisivo, es un universo libre, no individual, cada per-sona puede rerse de s misma, de los otros y corregirse a la vez que corregir.Esto se logra porque el juego es el centro de operaciones donde se rene lacreacin. No se aprende a ser escritor en un taller, no se aprende a serdramaturgo ni poeta pero s se aprende a no tener miedo de expresarse a

    *La Licenciada Graciela Perriconi es especialista en literatura infantil.

  • 7/25/2019 08_01_Perriconi

    2/3

    travs del lenguaje; por el contrario el lenguaje se debe convertir en un mediode autoafirmacin y de autoestima. Las actividades que surgen de unapropuesta aceptada por todos los que forman parte del taller son coordinadaspor un docente, un escritor o un investigador, alguien que conozca muy bien

    las tcnicas del taller y las posibilidades de produccin que ste ofrece ademsque tenga condiciones para conducir un grupo humano de nios, adolescenteso adultos.

    La finalidad de la actividad del taller es "la produccin" de mensajesescritos u orales de carcter esttico. Ahora bien, para llegar a producir ques necesario hacer? Varias acciones: leer detenidamente textos literarios,investigaciones, ensayos, bibliografa variada. Interpretar, discutir y poder irformando una ideologa sobre cada uno de los temas. Escribir con consignasmltiples, inventar historias a partir de palabras inslitas que existen en larealidad pero que el hablante desconoce, "dar lugar a la fantasa", escribir re-

    latos breves, cuentos, poesas, aplicando tcnicas de elaboracin, investigarsobre la obra general de algn autor en particular y poner todo el trabajo aconsideracin de los otros: "En el taller todo texto es bien aceptado. Estabuena aceptacin se traduce frente a los textos de los ms pequeos en unavaloracin positiva. A medida que los integrantes del taller son mayores, estaaceptacin se formula cada vez ms como un comentario o anlisis deaquellos aspectos del texto que ofrezcan mayor inters. El comentario designo negativo est absolutamente excluido. Nunca un texto est mal"(Pampillo, 1981 ).

    Esto significa que ningn texto es considerado un campo de

    exploracin del dficit lingstico de cada persona sino por el contrario debeconsiderarse como el mbito propicio para evaluar los logros, y si hubieseerrores stos deben ser tomados en cuenta por el grupo para su anlisis ypositiva devolucin. Esta postura en la evaluacin del trabajo cambiaratotalmente la perspectiva del maestro si el taller se convirtiera en unaactividad cotidiana porque integrara la gramtica, la estilstica y otros camposen una tarea creativa. Poder valorizar ntegramente el trabajo de cada nio,de cada joven o adulto desde sus posibilidades no desde sus limitaciones esotra peculiaridad del taller. La crtica inflexible resulta inadecuada y no es edu-cativa, insistimos que se trata de valorizar no de criticar.

    Cules son los momentos, qu implica este trabajo de taller?Hablamos anteriormente de la formulacin de una propuesta sobre la que seva a organizar la actividad. Luego sobreviene la lectura y comentario dediferentes textos o bien el trabajo con la lengua. Un tercer momento es laescritura, sobre lo que se ha investigado, sobre lo que se ha ledo, sobrevivencias o producciones de la fantasa y, finalmente, la evaluacin. Estosmomentos no son rgidos, si bien responden a una necesaria planificacin.Esta no puede ser tomada como una categora infranqueable, casimatemtica; generalmente lo que hace que las metodologas se distorsionenes la inflexibilidad que se pone en ellas. La seleccin del material de trabajo ylo que se realiza con l es una tarea que coordina el docente a cargo del tallerpero que se programa entre todos.

  • 7/25/2019 08_01_Perriconi

    3/3

    El docente coordina pero es uno ms, porque debe sentir con los otros,participar, actuar, discutir, contener y estimular toda la produccin. De all quepara un docente tan intelectualizado como el nuestro en sus mecanismos deacercamiento al saber, sentir lo que va conociendo, descubrir que los caminos

    de aproximacin al libro son mltiples, que los debe descubrir a la vez queayudar a los otros a hacerlo, que las palabras le pertenecen en su lgica, ensu necesidad de transgredir lo convencional, en su belleza y en su crueldad;saber, en definitiva, que hay un mundo que no se conoce por lo normativosino por lo vivido, es un verdadero hallazgo y adems contribuye a laevolucin como persona, esto es una real experiencia educativa en el sentidoms abarcativo del trmino.

    Hacer un taller es una provocacin de la lectura, porque es convocaren lo cotidiano del encuentro lo inslito del juego de poder decir y hacer algodiferente y mostrarlo. Los alumnos aprenden, pero el coordinador aprende

    mucho ms. El camino es una trayectoria de sensibilizacin con la lectura y laescritura, es un vehculo de las indefinibles maneras de saber que tiene elhombre que pasa por lo sistemtico de la escuela. Esto es lo ms importante,si el maestro adoptara la metodologa para analizar oraciones, para extraer lospronombres de un texto literario o para inventar modos ms originales deretener una poesa, la distancia sera la misma que puede plantearse en lasescuelas hoy. La distancia est generada por el mal uso que el adulto hace desu lenguaje y de su literatura.

    Se trata de aproximarnos para disfrutar ms de todas las propuestasque surgen a partir de la palabra y para convencernos de que stas

    actividades sostienen los aprendizajes verdaderos porque se fundamentan enla vida.

    Referencias bibliogrficas

    Blanco, L. Taller literario en la escuela. Taller, 1986.Bourneuf, D. y Par, A. Pedagoga y lectura. Colombia: Cerlal, Kapelusz y

    Procultura, 1983.Gamarra. El nio y el libro. Importancia de la lectura en la educacin. Buenos

    Aires: Kapelusz, 1976.G.F.F.N. El poder de leer. Gedisa, C. Hombre y Sociedad, 1978.

    Grafein. Teora y prctica del taller. Madrid: Altalena, 1981.Hazard, P. Los libros, los nios y los hombres. Barcelona: Juventud, 1972.Merlino, M. Cmo jugar y divertirse con las palabras. Madrid: Altalena, 1981.----Cmo jugar y divertirse con el peridico. Madrid: Altalena, 1980.Pampillo, Gloria. El taller de escritura. Buenos Aires: Plus Ultra, 1981.Patte, G. Si nos dejaran leer. Colombia: Cerlal, Kapelusz y Procultura, 1984.Rodari, G. Gramtica de la fantasa. Reforma de la Escuela, Barcelona.Sandroni, L. y Machado, L. El nio y el libro. Colombia: Cerlal, Kapelusz y Procultura,

    1984.Soriano, M. Guide de littrature pour la jeunesse. Flammarion, 1975.