03 identidad y si mismo

7/25/2019 03 Identidad y Si Mismo

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IDENTIDAD Y S MISMO

De la misma manera que un individuo debe atribuir significado a las personas, objetos y sucesosdel mundo que lo rodea, tambin debe asignarse un significado a s mismo. Y al hacerlo

establece sus identidades. La identidad es la respuesta que damos a la pregunta Quin soy yo!

"l concepto del s#$mismo est% estrechamente ligado al de identidad, algunos cient#ficos socialeslos emplean casi como sin&nimos. "l concepto del s mismo 'self( tiene una tradici&n mucho m%santigua ')illiam *ames, +-(, identidadcobr& prominencia en los /0, con "ri1 "ri1son.

)illiam *ames planteaba que el s# mismo 'self( contiene dos aspectos2 +( el Yo '3(, como elcognoscente activo, el sujeto4 y 5( el M '6e(, como el contenido pasivo, el objeto. 7l 6#actualmente se le llama Concepto de s.

"l s#$mismo es el individuo tal como es conocido por l mismo en un marco de referencia

socialmente determinado. 8e trata de una abstracci&n que establecemos referida a nuestrosatributos, capacidades y actividades. "ntra9a la concepci&n que desarrollamos acerca de nuestra

propia conducta, el sistema de conceptos que empleamos para tratar de autodefinirnos. :osvivenciamos como entidades separadas de los dem%s y dotadas de continuidad temporal. La ideadel smismo nos !ace sentirnos una unidad diferenciada" identifica#le" limitada$

"n la %sicologa Social sociol&gica, ;ooley y periencia propia de las corrientes de sensaciones que surgen en el interior de suorganismo. "n general nos percatamos s&lo borrosamente de esta corriente de sensaciones, y amenudo no la tomamos en cuenta en absoluto.

?ambin vivenciamos el smismo como un o#,eto social. 7lcan@amos un sentimiento demismidad actuando hacia nosotros mismos en forma parecida que hacia otras personas. ;uandoobramos as#, segAn 6ead, estamos asumiendo el rol del otro respecto de nosotrosmismos. "stono significa que cada cual deje de ser l mismo en algAn momento, sino que adopta una

perspecti'a do#le2 es simult%neamente el sujeto que observa y el objeto que es observado.7sumir el rol del otro hacia nosotros no es m%s que respondernos como podr#an hacerlo losdem%s 'como ellos podr#an enojarse, nos enojamos con nosotros mismos, p.ej.(

;&mo se puede ser a la ve@ el sujeto perceptor y el objeto percibido ;ooley denomina a estefen&meno la )autoimagen especular+, proceso que tiene tres elementos2

+. imaginamos de qu manera nos aparecemos ante las dem%s personas5. imaginamos de qu manera los dem%s ju@gan nuestra aparienciaB. e>perimentamos algAn sentimiento

"l s#$mismo especular es el medio por el cual llevamos a cabo este di%logo de autoevaluaci&n con

nosotros mismos, tomamos nuestro s#$mismo como objeto de la propia atenci&n.


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;omo plantea la teora de la conciencia de s" o autoconciencia , e>iste una dicotom#a entre losobjetos de la atenci&n consciente2 podemos dirigir sta hacia el ambiente e>terior o hacia el s#mismo interior. La atenci&n focali-ada en el interior" en el smismo" produce la conciencia des. 8egAn esta teor#a, si actuamos de maneras que entran en pugna con nuestros valores,

e>perimentamos una discrepancia en el interior del s#$mismo, que es un estado penoso. ?ratamosde redefinir nuestros criterios personales, o racionali@ar nuestra conducta, o sacamos el foco del s#mismo y lo dirigimos hacia el mundo e>terior.

8e ju@ga el propio comportamiento desde lo que uno cree que es el punto de vista del otro. Seacomoda lo me,or posi#le las acciones propias a las acciones potenciales del otro . "n estesentido, uno es el objeto, y se asume el rol del otro, al imaginar las posibles respuestas del otro.

La percepci&n de s mismo o autopercepci&n, como el proceso por el cual nos conocemos yrefle>ionamos sobre nosotros mismos, o sea, sobre las caracter#sticas, cualidades y estadosinteriores que nos atribuimos. Construimos concepciones de nosotros mismos (ue nos sir'en

para 'ol'er esta#le" predeci#le * mane,a#le la 'isi&n (ue tenemos de nosotros . 7l atribuirnosrasgos estables y disposiciones permanentes nos sentimos m%s capaces de comprender nuestrapropia conducta y de planear acciones futuras.

7parentemente para formar atribuciones sobre nosotros mismos, utili-amos en gran parte elmismo mecanismo de atri#uci&n de causalidad (ue para la percepci&n de los dem.s.Llegamos a conocer nuestras actitudes no tanto inspeccionando nuestros estados mentalesinteriores, como infirindolas de nuestra conducta manifiesta, de lo que decimos y hacemos,e/aminando situaciones para tomar de ellas indicadores e/ternos y luego efectuaratribuciones referidas a tales indicadores. Cem '+-5( plantea que inferimos nuestras actitudese>aminando situaciones que nos ofrecen indicadores e>ternos sobre nuestros estados internos.

7lcan@amos estas conclusiones bas%ndonos en la observaci&n de nuestro comportamiento y en losconte>tos en los cuales ste se desarrolla.

Eetomando la percepci&n del s# mismo corporal, nos percatamos de que algo sucede dentronuestro cuando estamos e>citados, angustiados, colricos o atemori@ados, pero si se le pide a lossujetos que describan sus emociones, habitualmente lo que refieren es qu cosa los e>cit&,angusti&, encoleri@& o atemori@&.

8chachter propone una e/plicaci&n fisiol&gica cogniti'a de las emociones20$ algo presente en nuestro ambiente nos activa fisiol&gicamente, produciendo un estado

afecti'o indiferenciado

1$ recurriendo a informaci&n procedente de nuestras e>periencias pasadas y de nuestrapercepci&n de la situaci&n, resol'emos (u2 es lo (ue estamos e/perimentando3$ asignamos luego un r&tuloa esa reacci&n2 amor, ira, temor, etc.

?odas nuestras reacciones fisiol&gicas son bastante similares,lo (ue distingue una de otra es lasituaci&n * el r&tulo (ue ad,udicamos a nuestro estado de acti'aci&n . "n este proceso deautorrotulaci&n emocionala menudo recurrimos a las condiciones e>teriores para evaluar einterpretar nuestro estados interiores.

7l e>perimentar de manera recurrente el mundo que nos rodea y las evaluaciones que los dem%shacen de nosotros, desarrollamos nuestra propia evaluaci&n de nosotros mismos.

Fay que distinguir entre la imagen de sy el concepto de s.

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=na imagen de ses un cuadro o concepto mental relativamente temporario que cada cual seforma de s# mismo, y que est% sujeto a cambios al pasar de una situaci&n social a otra."l concepto de s es la visi&n general que el individuo tiene de s# mismo, el sentido de

permanencia de un Yo Eeal, o yo como soy realmente!.

7mbos suelen ser bastante vagos, tampoco es el concepto de s# simplemente un promediofluctuante o suma de las im%genes de s#, m%s bien, la sucesi&n de im%genes de s# sirve para revisary corregir, m%s que suplantar, nuestro concepto de s#.

:uestros conceptos de s# envuelven li#retos" es(uemas o marcos mentalesmediante los cualesescogemos * procesamos la informaci&n referida a nosotros mismos. 7 cada nueva situaci&nde interacci&n social aportamos las generali@aciones cognitivas sobre el s#$mismo que hemosdesarrollado a partir de nuestra e>periencia anterior. "stos conceptos de s# reflejan los elementoscoherentes que hemos descubierto sobre nuestra conducta social, las pautas que hemos observadoen repetidas oportunidades en el curso de nuestra interacci&n con los dem%s. 7 partir de talesobservaciones, creamos marcos mentales que nos permiten hacer inferencias sobre nuestros

procederes con la gente, y los usamos para discernir e interpretar la informaci&n compleja acercade los sucesos.

Ya establecidos, nuestros conceptos de s funcionan como mecanismos selecti'os (ueinflu*en en la informaci&n a la (ue prestamos atenci&n , la manera en que la estructuramos, laimportancia que le concedemos y lo que posteriormente hacemos con ella. 7l acumulardeterminados tipos de e>periencia, nuestro concepto de s se 'uel'e cada 'e- m.s resistente aaceptar informaci&n incompati#leo contradictoria. 3nterpretamos la e>periencia y percibimosselectivamente, basados en los conceptos que nos hemos forjados previamente sobre nosotrosmismos. '"sto puede e>plicar la persistencia de im%genes incorrectas sobre su propio cuerpo en

personas que han ganado o perdido muchos 1ilos(

6uchos de nuestros conceptos de s se resisten enormemente al cam#io, uno de los motivos deque nuestros conceptos de s# sean tan estables procede de la manera en (ue procesamos lainformaci&n a,ena so#re nosotros mismos. "s m%s probable que fijemos y recordemos mejortodo aquello que confirme el concepto que ya tenemos de nosotros y que tendamos a subestimare ignorar la realimentaci&n que contrar#a ese concepto. Y a menudo culti'amos acti'amente loscomportamientos a,enos (ue lo apuntalan'hombre que piensa que es intimidatorio, tiende aintimidar a los dem%s(, no somos seres pasivos sobre los cuales actAan los dem%s.

"n cuanto al desarrollo del s# mismo, nuestros conceptos de s# surgen de la interacci&n social conotras personas y a su ve@, gu#an e influyen nuestro comportamiento posterior. Nos descu#rimos a

nosotros mismos en las acciones (ue otros reali-an respecto a nosotros. 7 la pregunta quinsoy!, la respuesta es anterior a la pregunta 'desde que se nace, sos ni9a, jud#a, buena ni9a, etc.(

:uestra autoevaluaci&n es un reflejo de la evaluaci&n que los dem%s hacen de nosotros.;onsecuentemente, est% en nuestras manos la clave de la identidad ajena. 8i se nos acepta,aprueba y admira por lo que somos, tendemos a adquirir actitudes de autoaceptaci&n yautorrespeto. 8i en cambio se nos subestima, acusa y recha@a, es probable que desarrollemosactitudes desfavorables hacia nosotros mismos. 8on los dem%s los que nos dicen quienes somos yc&mo somos, y a fin de lograr una realimentaci&n positiva y lo m%s favorable posible $paraacrecentar nuestra auto$estima, tratamos de amoldarnos a las definiciones (ue ellos formulanso#re nosotros$ El resultado es" con frecuencia" un comportamiento estereotipado$

:uestros conceptos de s# se vinculan m%s directamente con nuestra percepci&n de lasevaluaciones que los dem%s hacen de nosotros, que con las evaluaciones efectivas de los dem%s.

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8i bien Cem '+-5( dice que los individuos infieren sus actitudes y estados interiores de laobservaci&n que hacen de su conducta y de los conte>tos en los cuales ella se manifiesta, Gelson'+-+( puntuali@a que las percepciones de s# del tipo descripto por Cem e>igen que el individuo

posea ya patrones o criterios para interpretar lo que observa. La gente adquiere tales patrones ocriterios, de los dem%s en el curso de la sociali@aci&n. La percepci&n de s entra4a confrecuencia nuestra aplicaci&n de patrones culturales a nosotros mismos$

La autoestima es la valoraci&n que una persona hace de sus propios mritos, para algunosHsic&logos 8ociales es sin&nimo de concepto de s#. Los variados factores sociales que obran sobrela autoestima son2

*uicios ajenos acerca de nosotros

;aracter#sticas sociales y personales de nuestros semejantes 'por comparaci&n(

"l medio social 'por e>pectativas y definici&n de situaci&n(

La e>periencia previa en una situaci&n social concreta 'a+( aumenta la probabilidad de que unindividuo cause una impresi&n positiva en los dem%s 'b+( en situaciones similares4 talesimpresiones 'b+( real@an la visi&n que el sujeto tiene de s# 'c+(, y este concepto de s# positivo 'c+(incentiva al individuo para participar en situaciones de la misma #ndole en el futuro 'a5(2

a+ b+ c+ a5

sto es, la ndole cclica del concepto de s * de la conducta social" el primero influ*e en laconducta" la moldea * orienta * 'ice'ersa.

TEO5A DE LA IDENTIDAD SOCIAL

La teor#a de la identidad social fue desarrollada por Fenri ?ajfel y *ohn ?urner '+--(. "n primerlugar plantea que buscamos en la cultura que nos rodea claves que nos permitan sentirnos partede un todo m%s amplio, es por ello que las normas sociales tales como estilo de vestimenta,creencias religiosas o pol#ticas se vuelven tan importantes para algunas personas. "sta teor#a

plantea tres ideas centrales2

Categori-aci&n2 as# como se categori@an objetos o personas para poder entenderlas, descubrimoscosas de nosotros mismos al conocer a qu categor#a pertenecemos. Definimos elcomportamiento apropiado en trminos de las normas de los grupos a los que pertenecemos.

Identificaci&n2 :os identificamos con los grupos a los que percibimos que pertenecemos, estamembres#a grupal nos aporta parte de lo que somos, pero en ocasiones nos pensamos a nosotrosmismos como miembros de un grupo 'identidad social( y en otras como individuos Anicos'identidad personal(. "sto es fle>ible y var#a situacionalmente.

Comparaci&n2 Hara evaluarnos a nosotros mismos nos comparamos con otros similares. "n arasde la auto$estima, nos comparamos con otros miembros de nuestro grupo, y tambin podemosvernos de forma positiva al vernos como parte de un grupo prestigioso.

"n relaci&n a la identidad grupal, hay un sesgo generali@ado en la que vemos el grupo al que

pertenecemos como formado por individuos distintos entre s# 'heterogenei@aci&n grupal(, y a

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otros grupos, como si todos los miembros fueran iguales 'homogenei@aci&n e>tra$grupal(. '?odoslos estudiantes son iguales, un estudiante dir#a, no es as#, hay de este tipo y de este otro(

TEO5IA DE LA CATE6O5I7ACI8N DEL SIMISMO

*ohn ?urner et. al. '+-J( hac#an hincapi en que en diferentes momentos nos percibimos anosotros mismos como individuos Anicos y en otras como miembros de grupos, y que stas sonambas igualmente v%lidas e>presiones del s# mismo. "sto es, que nuestras identidades socialesson tan 'erdaderas * #.sicas para el s mismo" como la identidad personal . 7hora bien,cuando nos percibimos como miembros de un grupo, nos vemos menos como individuos Anicos,

pero esto no son s&lo dos niveles, sino que hay diferentes niveles de abstracci&n!. "ste cambiofle>ible de la auto$percepci&n es el centro de esta teor#a, y para los fines del estudio de lainfluencia social, el nivel grupal de abstracci&n es aqul en el que los individuos se ven a s#mismos como intercambiables! con otros miembros del grupo, y distintos a miembros de otrosgrupos.

"sta teor#a ha sido aplicada a muchos procesos en Hsicolog#a 8ocial, particularmente en relaci&n aestereotipos, juicios sociales, comportamiento de muchedumbres, procesos en grupos peque9os,

pero su mayor aplicaci&n ha sido en la e>plicaci&n de la influencia social.

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