vernal, t. & l. b. valderrama (2014). la percepción de la ciencia y de científicos/as en un país...

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ISSN 0718-4425 | DICIEMBRE | 2014 | P. 42 – 50 Se han realizado diversos estudios sobre la percepción infantil de la ciencia y de el/la científico/a en países desarrollados, tanto en Europa como en Norteamérica. Sin embargo, aún falta conocimiento empírico sobre dicha materia en países en vías de desarrollo como es el caso de Chile. La presente experiencia aborda el análisis de la percepción de la ciencia de el/la científico/a en niños entre once y trece años con talento académico de la Región de Antofagasta, Chile. Se escogió esta zona por ser una región con alto desarrollo científico en las áreas de la astronomía, acuicultura, biotecnología y minería, entre otras. El estudio se realizó a modo de seguimiento en el marco de un curso sobre periodismo científico del Programa DELTA (Desa- rrollando y Liderando Talentos Académicos) de la Universidad Católi- ca del Norte (UCN). La modalidad de seguimiento permitió constatar cambios de percepciones a medida que el curso se iba desarrollando, es decir, un contacto directo con científicos/as cambió las percepcio- nes que los niños tenían de éstos. Asimismo un acercamiento como el que ofrece el periodismo científico produjo cambios en la percepción sobre la ciencia y una valorización hacia las potencialidades cientí- ficas de la región. LA PERCEPCIÓN DE LA CIENCIA Y DE CIENTÍFICOS/AS EN UN PAÍS AUSTRAL. EL CASO DE DELTA CHILE * Becaria Pre- doctorado Facultad de Comunicaciones Universidad Pompeu Fabra, Barcelona (Conicyt Becas Chile 2011-2015). Contacto: [email protected]. ** Becaria Pre-doctorado en Instituto de Historia de la Medicina y de la Ciencia López Piñero (Conicyt Becas Chile 2011-2015). There have been executed several studies on infant perception of science and the scientist in developed countries, both in Europe and in North America. However, there is still a lack of empirical knowle- dge about this subject in developing countries such as Chile. This experience is intended to address the analysis of the perception of science of the scientist in children between eleven and thirteen years old with academic talent in the Region of Antofagasta, Chile. This area was chosen because is a region with high scientific development in the areas of astronomy, aquaculture, biotechnology and mining, among others. The study was conducted as a follow up as part of a course on science journalism DELTA Program (Developing and Lea- ding Academic Talents) of the Universidad Católica del Norte (UCN). The tracking mode perceptions helped to confirm changes as the course was developing, i.e. direct contact with scientists changed the perceptions that these children had. Also an approach such as that offered by science journalism produced changes in the perception of science and an appreciation to the scientific potential of the region. PALABRAS CLAVES: CIENCIA, COMUNICACIÓN CIENTÍFICA, DIVULGA- CIÓN CIENTÍFICA, EDUCACIÓN CIENTÍFICA, ESTEREOTIPOS Y VOCACIÓN. KEY WORDS: SCIENCE, COMMUNICATION OF SCIENCE, POPULARIZATION OF SCIENCE, SCIENTIFIC EDUCATION, STEREOTYPES AND VOCATION. teresa VERNAL*; lorena b. VALDERRAMA** RESUMEN THE PERCEPTION OF SCIENCE AND THE SCIENTIST ON A SOUTHERN COUNTRY. THE CASE OF CHILE DELTA ABSTRACT PERIODISMO Y COMUNICIONES Recibido: 7/1/14 | Aceptado: 15/13/14 REVISTA TERCER MILENIO Año XVIII | No. 28

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Se han realizado diversos estudios sobre la percepción infantil dela ciencia y de el/la cientíco/a en países desarrollados, tanto en Europa como en Norteamérica. Sin embargo, aún falta conocimientoempírico sobre dicha materia en países en vías de desarrollo como es el caso de Chile. La presente experiencia aborda el análisis de lapercepción de la ciencia de el/la cientíco/a en niños entre once y trece años con talento académico de la Región de Antofagasta, Chile. Se escogió esta zona por ser una región con alto desarrollo cientíco en las áreas de la astronomía, acuicultura, biotecnología y minería,entre otras. El estudio se realizó a modo de seguimiento en el marcode un curso sobre periodismo cientíco del Programa DELTA (Desa-rrollando y Liderando Talentos Académicos) de la Universidad Católi-ca del Norte (UCN). La modalidad de seguimiento permitió constatar cambios de percepciones a medida que el curso se iba desarrollando, es decir, un contacto directo con científicos/as cambió las percepciones que los niños tenían de éstos. Asimismo un acercamiento como el que ofrece el periodismo cientíco produjo cambios en la percepciónsobre la ciencia y una valorización hacia las potencialidades cientí-cas de la región.

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  • ISSN 0718-4425 | DICIEMBRE | 2014 | P. 42 50

    Se han realizado diversos estudios sobre la percepcin infantil de la ciencia y de el/la cientfico/a en pases desarrollados, tanto en Europa como en Norteamrica. Sin embargo, an falta conocimiento emprico sobre dicha materia en pases en vas de desarrollo como es el caso de Chile. La presente experiencia aborda el anlisis de la percepcin de la ciencia de el/la cientfico/a en nios entre once y trece aos con talento acadmico de la Regin de Antofagasta, Chile. Se escogi esta zona por ser una regin con alto desarrollo cientfico en las reas de la astronoma, acuicultura, biotecnologa y minera, entre otras. El estudio se realiz a modo de seguimiento en el marco de un curso sobre periodismo cientfico del Programa DELTA (Desa-rrollando y Liderando Talentos Acadmicos) de la Universidad Catli-ca del Norte (UCN). La modalidad de seguimiento permiti constatar cambios de percepciones a medida que el curso se iba desarrollando, es decir, un contacto directo con cientficos/as cambi las percepcio-nes que los nios tenan de stos. Asimismo un acercamiento como el que ofrece el periodismo cientfico produjo cambios en la percepcin sobre la ciencia y una valorizacin hacia las potencialidades cient-ficas de la regin.

    LA PERCEPCIN DE LA CIENCIA Y DE CIENTFICOS/AS EN UN PAS AUSTRAL. EL CASO DE DELTA CHILE

    * Becaria Pre- doctorado Facultad de Comunicaciones Universidad Pompeu Fabra, Barcelona (Conicyt Becas Chile 2011-2015). Contacto: [email protected].

    ** Becaria Pre-doctorado en Instituto de Historia de la Medicina y de la Ciencia Lpez Piero (Conicyt Becas Chile 2011-2015).

    There have been executed several studies on infant perception of science and the scientist in developed countries, both in Europe and in North America. However, there is still a lack of empirical knowle-dge about this subject in developing countries such as Chile. This experience is intended to address the analysis of the perception of science of the scientist in children between eleven and thirteen years old with academic talent in the Region of Antofagasta, Chile. This area was chosen because is a region with high scientific development in the areas of astronomy, aquaculture, biotechnology and mining, among others. The study was conducted as a follow up as part of a course on science journalism DELTA Program (Developing and Lea-ding Academic Talents) of the Universidad Catlica del Norte (UCN). The tracking mode perceptions helped to confirm changes as the course was developing, i.e. direct contact with scientists changed the perceptions that these children had. Also an approach such as that offered by science journalism produced changes in the perception of science and an appreciation to the scientific potential of the region.

    PALABRAS CLAVES: CIENCIA, COMUNICACIN CIENTFICA, DIVULGA-CIN CIENTFICA, EDUCACIN CIENTFICA, ESTEREOTIPOS Y VOCACIN.

    KEY WORDS: SCIENCE, COMMUNICATION OF SCIENCE, POPULARIZATION OF SCIENCE, SCIENTIFIC EDUCATION, STEREOTYPES AND VOCATION.

    teresa VERNAL*; lorena b. VALDERRAMA**

    RESUMEN

    THE PERCEPTION OF SCIENCE AND THE SCIENTIST ON A SOUTHERN COUNTRY. THE CASE OF CHILE DELTA

    ABSTRACT

    PERIODISMO Y COMUNICIONESRecibido: 7/1/14 | Aceptado: 15/13/14

    REVISTA TERCER MILENIOAo XV I I I | No. 28

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    Introduccin y estado del arte

    Numerosos estudios se han centrado en la investigacin sobre la percepcin de la ciencia y de los cientficos en los estudiantes. Pionero fue el estudio de Mead y Me-traux en la dcada del 50 el cual abri una lnea de in-vestigacin novedosa. Esta investigacin se realiz con ms de 35 mil alumnos a quienes se les pidi escribir un ensayo que caracterizara a una persona de ciencias. De esta forma, segn los resultados de Mead y Metraux la imagen estereotpica de la persona de ciencias, entre los estudiante secundarios de Estados Unidos, era la de un hombre de mediana o avanzada edad, con bata blanca y lentes que trabajaba en un laboratorio realizando peli-grosos experimentos (Mead y Metraux 1957).

    Siguiendo esta lnea de investigacin, Beardslee y ODowd aplicaron un cuestionario a 1200 estudian-tes universitarios, el cual arroj similares resultados (Beardslee y ODowd 1961). Otros que han realizado investigaciones son Chambers (1983), Schibeci & So-rensen (1983), Schibeci & Riley (1986), Fort & Var-ney (1989), Flick, (1990), Mason, Kahle & Gardner (1991), Finson et al. (1995), Sumrall (1995), Neathery (1997), Steinke (1997), Newton & Newton (1998), She (1998), Song & Kim (1999), Andre, Whigham, Hen-drickson & Chambers (1999), Barman (1999), Joyce Farenga (1999). Los ltimos trabajos en este campo corresponden a Weinburg & Steele (2000), Calabrese Barton (2001), Morgan, Isaac & Sansone (2001), Cha-vous (2002), Finson (2002, 2003), Fung (2002), Ma-ttern & Shau (2002), Sjoberg (2002), Rubin, Bar & Cohen (2003), Weinburg (2003), Steinke (2005), Beldu (2006), Christidou (2006), Rodari (2007), Chavous, Rivas-Drake, Smalls, Griffin & Cogburn (2008), Ac-kay (2011), Christidou (2011), Christidou, Hatzinikita & Samaras (2012), Ruiz-Malln & Escalas (2012).

    Estos estudios han sido ejecutados en pases como Es-tados Unidos, Australia, Inglaterra, Espaa, Repblica Checa, Grecia, Turqua, Portugal, Francia, Italia, Polo-nia, Rumania y Canad. En tanto la educacin cientfica en los estudiantes, el bajo inters en temas relacionados con la ciencia o bien actitudes negativas hacia cientfi-cos han sido estudiados por Gardner (1985), Dawson (2000), Gough (2002), Sjoberg (2002), Britner & Pa-jares (2006) y Britner (2008). Sin embargo, no existe ningn estudio que aborde pases latinoamericanos en desarrollo como es el caso de Chile.

    Este trabajo aborda de forma exploratoria la percepcin de la ciencia y de profesionales de la ciencia en nios

    chilenos. Para ello se escogi a estudiantes de primaria con talentos acadmicos quienes participan del progra-ma DELTA (Desarrollando y Liderando Talentos Aca-dmicos) de la Universidad Catlica del Norte (UCN) en la ciudad de Antofagasta en Chile. Este programa cuenta con un alto potencial cientfico en ciencias de la minera, astronoma, acuicultura y biotecnolgica, en-tre otras. Se escogi a nios con talento acadmico que participaban de dicho programa, puesto que la mayora de ellos haban manifestado su inters por la ciencia. Se presentaba as una buena oportunidad de evaluar el cambio de percepciones que los nios tenan sobre la ciencia y los profesionales de la ciencia al entrar en contacto directo e intensivo con el quehacer cientfico y las personas que lo desarrollan desde su posicin de reporteros.

    Talento acadmico para esta experiencia

    El talento acadmico se manifiesta por una habilidad significativamente superior que posee una persona con relacin a sus pares en el mbito acadmico (Lpez et. al. 2002, 184).

    En este sentido, los nios que han participado de esta experiencia tienen un dominio destacado de conoci-mientos, destrezas o habilidades en un grado superior a su rango de edad, al menos en una de las reas, las cuales pueden ser artsticas, deportivas o acadmicas (Flanagan & Arancibia 2005).

    Cuando el talento se manifiesta a temprana edad - en cualquiera de las reas mencionadas anteriormente - es necesaria una motivacin y estimulacin, ya que si la nia o el nio se manejan de manera pasiva o no prestan atencin a los estmulos circundantes, ella o l no de-sarrollarn sus talentos. El desarrollo solo tendr lugar cuando el individuo interacta de manera activa con el ambiente y est abierto a recibir la estimulacin (Blu-men 2008, 153).

    Es as como se han creado programas que atienden a estas necesidades, tales como DELTA en la Regin de Antofagasta y es por ello, entonces, que con la finalidad de contribuir a la motivacin y al desarrollo del talento acadmico en estos nios se aplic la presente experien-cia en DELTA.

    Segn el psiclogo Joseph Renzulli (2008), reconocido especialista en superdotacin, los programas para los estudiantes con altas capacidades han sido un gran es-pacio para la experimentacin, debido a que tales pro-

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    En Chile, desde hace algunos aos se ha prestado aten-cin a los talentos acadmicos de nias y nios, a tra-vs de programas educativos formados en instituciones universitarias que fomentan el enriquecimiento extra-curricular para desarrollar habilidades en lenguaje y es-critura, lgica y matemtica, ciencias naturales o cien-cias sociales e incluso artes. Tal es el caso del programa DELTA, el cual se viene desarrollando hace nueve aos.

    En el marco de este programa se ha estado realizando desde el ao 2012 un taller de periodismo cientfico que pretende acercar a los y las estudiantes de primaria con talentos acadmicos a los medios de comunicacin y a las potencialidades cientficas y tecnolgicas de su regin.

    Estereotipos de el/la cientfico/a en nios

    La imagen de los cientficos dentro de la cultura de ma-sas ha seguido estereotipos bien definidos. El prototipo de hombre caucsico de mediana a avanzada edad, ex-cntricos, con bata blanca, gafas y trabajando en un la-boratorio, fue un estereotipo del cientfico que se man-tuvo entre 1945-1975 (Basalla 1976).

    La investigacin de Mead y Metraux se realiz con ms de 35 mil alumnos a quienes se les pidi escribir un ensayo que describiera a una persona de ciencias. Sus resultados demuestran que durante la dcada del 50 los estudiantes secundarios de Estados Unidos tenan una imagen estereotpica de un cientfico de mediana o avanzada edad, que usaba bata blanca y lentes y que se desempeaba realizando peligrosos experimentos en un laboratorio (Mead y Metraux 1957).

    Durante los aos 60 y 70 estos estereotipos se man-tuvieron relativamente estables en los resultados arro-jados de estudios centrados en la poblacin infantil (Finson 2002). De igual forma, se comenz a realizar este tipo de estudios a travs del dibujo. Fue as como Chambers desarroll el DAST (Draw A Scientist Test), el cual aplic durante 1966 y 1977 a 4807 nios entre cinco y once aos, en Canad, Estados Unidos y Aus-tralia (Chambers 1983). A travs de este estudio se pudo constatar que la imagen estereotpica de la persona de-dicada a las ciencias entre los estudiantes secundarios reportada por Mead y Metraux en 1957, se repeta ex-tendindose a sociedades como la australiana y la cana-

    diense. Hombre, con bata blanca, anteojos, vello facial y equipamiento de laboratorio era parte de lo dibujado por lo nios ms pequeos en su descripcin de la per-sona de ciencia (Chambers 1983). Cinco aos ms tarde se desarroll el DAST-C, el cual incluy variables como el gnero y la raza (Finson 2002).

    Schibeci y Sorensen (1983) aplicaron el DAST a 463 ni-os entre los seis y doce aos de edad en dos escuelas de Australia: una en la que asistan una mayor cantidad de nios con descendencia aborigen y otra en la que asis-tan mayoritariamente nios de raza caucsica. En este estudio se concluy que muchos de estos estereotipos se reportaban ms en los nios con ndices socioeconmi-cos elevados. Con respecto a la generacin de esta visin estereotipada del cientfico/a, Schibeci determin en un estudio posterior que sta se deba a la representacin que haca la televisin de los cientficos (Schibeci 1986). Planteamientos similares con respecto a la responsabili-dad de los medios de comunicacin en la proyeccin de una imagen distorsionada de la ciencia, ya haban sido anunciados por Pearlman (1974) y Goodfield (1981).

    En la misma dcada Fort y Varney realizaron el estudio sobre el estereotipo de la persona de ciencias, a travs de 1600 estudiantes entre los niveles escolares dos y doce. Si bien ms del 60% de los consultados eran ni-as y adolescentes, slo 165 dibujos correspondan a una cientfica (Fort & Varney 1989).

    En la dcada de 90, Flick aplic el DAST a dos cursos distintos del nivel escolar cinco en un experimento que inclua un antes y un despus: durante tres semanas una de las clases recibira la visita de dos cientficas, quienes les hablaran a los estudiantes acerca de sus logros en el campo de la ciencia. En tanto, en la siguiente clase reci-biran a otros dos profesionales de la ciencia: una mujer y un hombre. En los primeros resultados del DAST, la mayora de los dibujos de ambos grupos correspondan a profesionales de la ciencia de gnero masculino con otros indicadores encontrados tales como el uso de la bata blanca o instrumentos de laboratorio. Sin embar-go, tras la visita de las cientficas, la presencia femenina como imagen estereotpica en los dibujos aument, en tanto, el uso de indicadores estereotpicos -como la bata blanca o los instrumentos- disminuyeron (Flick 1990).

    Sumrall aplic el DAST a 358 estudiantes entre los ni-veles primarios de uno a siete, pero agreg un apartado para permitir a los consultados explicar sus dibujos. Por ejemplo, algunas de las razones entregadas para los di-bujos que tenan como figura central a un cientfico,

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    fueron del tipo todos los cientficos son hombres o los hombres son ms inteligentes que las mujeres (Sumrall 1995, 86).

    Por el mismo periodo, Finson y su equipo aplicaron el DAST-C en estudiantes de octavo grado aplicando tres pruebas (pre-test, post-test y delayed test). Sus re-sultados apuntaron a que los estereotipos aumentaron cuando los estudiantes se vieron expuestos a exposicio-nes de cientficos hombres en laboratorio con vello facial en el rostro, en tanto que disminuyeron a medida que estuvieron en contacto prolongado con los profesionales en el campo (Finson et al. 1995).

    Entre los aos 2005 y 2007, se aplic el DAST en nios de nuevo y catorce aos de Repblica Checa, Francia, Italia, Polonia, Portugal y Rumania, en cuyo estudio tambin se encontraron imgenes estereotipadas del cientfico y de la ciencia (Rodari 2007). De igual forma, concluye el estudio de Ruiz-Malln & Escalas (2012), quienes aplicaron el DAST a nios catalanes de doce aos. Los 236 dibujos analizados por Ruiz-Malln y Escalas demuestran que sobre todo los nios catalanes de doce aos tienen una imagen estereotipada del cien-tfico, enfatizando la importancia de la comunicacin y educacin de la ciencia para modificar estas percepcio-nes (Ruiz-Malln & Escalas 2012).

    Material y mtodos

    Se aplic un cuestionario semi-estructurado de pregun-tas abiertas a todos los estudiantes, quienes formaban parte del curso de talento acadmico DELTA orientado a comunicar ciencia. La poblacin estaba compuesta por catorce estudiantes con edades que comprendan entre los once y trece aos.

    Todo este estudio se realiz siguiendo la pauta de la Ethical Guidelines For Educational Research de la British Educational Research Association (2011) con el consentimiento informado y la previa autorizacin de los tutores correspondientes.

    Para analizar los cambios de percepcin en los partici-pantes sobre la ciencia y el/la cientfico/a- se realizaron tres cuestionarios con preguntas abiertas y cerradas que incluyeron - en algunos casos un tem para dibujar. Estos cuestionarios fueron aplicados durante el desarro-llo de las distintas unidades del curso.

    En este sentido, intentamos utilizar la modalidad de seguimiento a travs de tres pruebas propuestas por

    Finson et al. (1995) a fin de medir cambios en las per-cepciones de los estudiantes. De igual forma, esta tcni-ca de evaluacin fue realizada de acuerdo a un enfoque cualitativo propuesto por Hernndez et. al. (2004), con la finalidad de potenciar el desarrollo del conocimiento, construir teoras sobre la base de los resultados, resolver problemas y las preguntas planteadas anteriormente.

    El desarrollo del curso implicaba, adems, conocer ms acerca del periodismo cientfico y de la ciencia de la re-gin. Por ello, durante el desarrollo del curso los alum-nos sostendran actividades prcticas, tales como entre-vistas, conferencias de prensa y reuniones con diversos cientficos y cientficas de la regin.

    Lo que pretenda el estudio-seguimiento era compro-bar si al igual que estudio de Flick (1990), los estereoti-pos del/la cientfico/a cambiaban a medida que se iban relacionando con otras personas de ciencia.

    Tres cuestionarios aplicados.

    El primer cuestionario se realiz el primer da del cur-so antes de iniciar la clase y estuvo conformado por 19 preguntas abiertas sobre sus percepciones de la ciencia y tecnologa. Todo ello con la finalidad de conocer y pro-fundizar las opiniones y apreciaciones de los estudiantes frente al tema (Hernndez et.al. 2010).

    El segundo cuestionario fue aplicado al sexto da de ta-ller finalizando la tercera unidad y estuvo conformado por cuatro preguntas abiertas y cuatro preguntas cerra-das. Todas ellas similares a las contenidas en el primer cuestionario.

    En el tercer y ltimo cuestionario -aplicado al finali-zar el curso los alumnos respondieron diez preguntas abiertas y cuatro cerradas de las cuales ocho fueron si-milares a las del segundo cuestionario.

    De esta manera, fue posible evaluar en los alumnos par-ticipantes el desarrollo y cambio de sus percepciones acerca de la ciencia y del cientfico durante el transcurso de las clases, tanto al inicio, al medio y al final, por me-dio de un anlisis cualitativo.

    El anlisis de los cuestionarios aplicados, entonces, busc interpretar experiencias y creencias relatadas por los estudiantes (Chernobilsky 2006) y la luego la infor-macin fue codificada con el propsito de categorizar y analizar las opiniones. (Flick 2004)

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    Anlisis y resultados

    Primer cuestionario.

    Al iniciar el curso y responder el primer cuestionario, los estudiantes manifestaron su gusto por aprender ciencias. El 70% concord en que la ciencia era intere-sante, divertida y novedosa. El estudiante A destac que me gusta, porque la profesora del taller explica bien. Sin embargo, los estudiantes B, J y M reconocieron no tener un gusto por la ciencia y tecnologa porque no la encontraban entretenida y consideraban que no tenan aptitudes para sta.

    Al abordar la divulgacin de la ciencia y tecnologa en los medios de comunicacin, ocho de los catorce consul-tados reconocieron que alguna vez haban ledo noticias cientficas enfocadas a desastres naturales, salud y astro-noma. El resto (seis) asegur nunca haber ledo noticias sobre ciencia y tecnologa en los peridicos.

    Con respecto a la televisin, la mitad de ellos (siete) mencion haber visto, alguna vez, programas o cana-les cientficos, tales como Animal Planet, Discovery Channel, Top Gear o National Geographic.

    En este sentido, slo los estudiantes B, H y L manifes-taron el gusto por leer noticias de ciencia y tecnologa.

    En el primer y tercer cuestionario se les pidi a los es-tudiantes que dibujaran y describieran a un cientfico de acuerdo a sus apreciaciones personales. Fue as como al iniciar el curso los estudiantes describieron a los cient-ficos como personas inteligentes, trabajadoras, esforza-das, interesantes, curiosas, responsables, osadas, amiga-bles y tmidas.

    En cuanto a la imagen y apariencia el gnero fue equi-tativo en cuanto a hombres y mujeres dibujados. En el caso de los hombres, stos fueron interpretados como calvos, algunos con bigotes, adultos mayores y con una expresin seria. Dentro de las vestimentas fue posible apreciar- en todos los casos - bata blanca y gafas en la minora.

    El estudiante H - en su dibujo - personific a un cien-tfico como Albert Einstein, adulto mayor, pelo blanco y desordenado, calvo, cejas gruesas, bigotes, humita, ca-misa, pantalones largos, zapatos y delantal blanco.

    Las mujeres fueron dibujadas con cabello corto o co-gido, edad adulta, y con expresin seria. Dentro de las

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    vestimentas fue posible apreciar - en todos los casos - delantal blanco y en ninguno gafas.

    El estudiante N realiz un dibujo comparativo. Prime-ramente dibuj a una cientfica con aspecto maligno en cual se muestra con cabello desordenado, cejas gruesas, ojos enfadados, dentadura imperfecta y delantal blanco. Sobre este dibuj escribi en las pelculas. A su lado, dibuj a una cientfica de aspecto amigable con cabello ordenado, delantal blanco, gafas y una sonrisa. Sobre este dibujo escribi como son.

    En casi todos los dibujos se utilizaron herramientas y objetos complementarios, tales como libros, instrumen-tos qumicos, escritorios y estantes.

    Segundo cuestionario.

    Luego de seis clases didcticas a los estudiantes, nue-vamente, se les pregunt sobre el gusto por aprender ciencia y tecnologa. Fue as como el grupo que en el primer cuestionario respondi tener inters por la mis-ma, repiti su afirmacin.

    En el caso de B, J y M que primeramente reconocieron no tener inters por la ciencia, presentaron algunas va-riaciones en sus respuestas. En el caso de los tres partici-pantes, las respuestas cambiaron de negativas a un poco de gusto por la ciencia y tecnologa, su justificacin - en los tres casos - fue que la consideraban aburrida.

    Al abordar, directamente, la divulgacin de la ciencia y tecnologa junto con haber realizado ejercicios prcticos de prensa, doce de los catorce alumnos consideraron que s se puede aprender ciencia y tecnologa a travs de los diarios, mientras que los dos restantes contestaron que slo a veces esto es posible.

    En cuanto a la televisin, once de los catorce estudian-tes consideraron que s se puede aprender ciencia y tec-nologa a travs de la televisin, mientras que los tres restantes consideraron que esto es posible slo a veces.

    Por otra parte, cinco de los catorce estudiantes afirma-ron que s es posible aprender ciencia y tecnologa a tra-vs de la radio, mientras que seis estudiantes manifesta-ron que slo a veces y tres que no.

    En el caso de Internet, trece de los catorce estudiantes consideraron que s es posible aprender ciencia y tecno-loga a travs de Internet, mientras que uno manifest que esto slo es posible a veces.

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    Tercer cuestionario.

    En el cuestionario aplicado el ltimo da del curso, nuevamente, se les pregunt a los estudiantes sobre el gusto por aprender ciencia y tecnologa, en donde - a excepcin de M - todos respondieron tener un inters por la ciencia debido a que era entretenida, interesante y permita experimentar.

    En este sentido y de acuerdo al cuestionario anterior, el estudiante M no present variacin en su respuesta y sigui manteniendo su postura (segundo cuestionario) de que la ciencia es un poco aburrida. Sin embargo, B y J cambiaron su parecer sobre la ciencia y tecnologa, manifestando un inters positivo hacia stas.

    En el caso de los estudiantes A y G vincularon su inters por la ciencia con el trabajo periodstico. Por ejemplo A consider que lo ms interesante de la ciencia y tecnolo-ga es cuando filman a los entrevistados y G cuando se realizan entrevistas.

    Al preguntarles su inters por ser cientficos en el fu-turo, seis estudiantes manifestaron su inters por estu-diar carreras cientficas de los cuales tres mencionaron astronoma, uno geologa y los restantes an no tenan definido.

    Otros seis estudiantes comentaron que no tienen inters en estudiar carreras cientficas, porque desean estudiar otras reas tales como humanista u oficios. Dentro de ese grupo, la estudiante D manifest cierta flexibilidad al decir que no quiero, pero si estudiara ciencias me gustara medicina.

    Los dos estudiantes restantes consideraron que an no tenan claro o no lo haban pensado.

    Con respecto a las descripciones e imgenes que tenan sobre los/las cientficos/as, luego de haber tenido acer-camientos con cientficos/as durante todo el curso los estudiantes mencionaron otros aspectos. Por ejemplo dijeron que stos/as eran amigables, simpticos, buenas personas, importantes para el pas, curiosos e interesa-dos por la ciencia.

    El estudiante C que en el primer cuestionario describi a un cientfico como una persona inteligente y con pa-ciencia para resolver problemas, en el tercer cuestiona-rio mencion que se imagina a un cientfico como una persona normal, pero con inters de aprender sobre ciencia.

    Por otro lado, el estudiante L que en el primer cuestio-nario dibuj a un cientfico de aspecto mayor, con bata blanca y en un laboratorio, en el tercer cuestionario des-cribi en palabras a un cientfico como una persona con ropa normal, a veces bata y casi joven.

    En cuanto a los dibujos, nuevamente, fueron equitativos en relacin al sexo de los cientficos. Sin embargo, quie-nes dibujaron hombres los hicieron sin calvicie, todos de apariencia juvenil y expresin sonriente. Dentro de las vestimentas, los dibujaron con gafas modernas y slo a uno con delantal blanco.

    En el caso de las mujeres, stas fueron dibujadas con apariencia fsica juvenil, cabello largo y expresin son-riente. Dentro de las vestimentas fue posible interpretar que no llevaban bata blanca ni gafas y usaban pantalo-nes.

    Esta vez, en ninguno de los casos, se dibujaron herra-mientas y objetos complementarios de laboratorio como en el primer cuestionario.

    El estudiante N en su dibujo describi a todos los cien-tficos que conoci durante el curso y tambin se dibuj asimismo. Todos dibujados con una expresin alegre, juvenil y sin bata blanca, agregando la frase los cient-ficos no son como en televisin, locos y dementes, slo son gente normal.

    Discusin y conclusiones

    De acuerdo a las percepciones sobre la ciencia y el/la cientfico/a, se pudo constatar que la mayora de los es-tudiantes en un comienzo posea una visin estereotipa-da y similar a la demostrada en los estudios precedentes ya citados. Sin embargo, luego de que los estudiantes realizaran el curso de periodismo cientfico fue posible ver un cambio de esta percepcin, aumentando el inte-rs por la ciencia en aquellos que ya manifestaban una motivacin y modificando, positivamente, la de aqullos que no tenan mayor inters en la ciencia cuando inicia-ron el curso.

    Fue as como luego de una motivacin y hacindolos notar que tenan aptitudes y talento en el rea, a pesar de su nivel de esfuerzo, presentaron cambios positivos en su inters por la ciencia y tecnologa (Blumen 2008).

    Asimismo, fue posible interpretar que gracias al acerca-miento que los estudiantes tuvieron con cientficos de su entorno, lograron cambiar la percepcin hacia stos.

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    Si bien en un comienzo los visualizaron con cierta dis-tancia y con imgenes estereotipadas, luego de las en-trevistas y conversaciones los percibieron de forma ms cercana y sencilla.

    Finalmente, fue posible interpretar que casi la mitad de los estudiantes tiene inters por estudiar carreras cien-tficas y ms de la mitad del grupo no descartara ser periodista cientfico. Incluso algunos de ellos manifes-taron su inters por mezclar ambas disciplinas, lo cual deja de manifiesto que los estudiantes comprenden la posibilidad de divulgar la ciencia, a travs de los medios de comunicacin.

    Quizs no deseen ser cientficos en un futuro, pero fue-ron cambiando su impresin de la ciencia y tecnologa junto con comprender la importancia de sta en la socie-dad actual. Todo ello deja de manifiesto cmo el curso de periodismo cientfico logr potenciar el inters por la divulgacin y valoracin de la ciencia en estos estu-diantes.

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