El autoengaño hace que

perdamos la perspectiva

con respecto a la

honestidad de los propios

actos, obviando todas

aquellas visiones que

pudieran alterar nuestra

decisión.

En su sentido más

evidente, la honestidad

puede entenderse como

el simple respeto a la

verdad en relación con

el mundo, los hechos y

las personas

La honestidad

según Confucio.

Es uno de los valores y

componentes más importantes

de una personalidad

saludable.

Una buena persona debe

mostrar sus sentimientos

sinceramente en su rostro.

La moral de Confucio se basa en la empatía y

comprensión de los demás.

Consiste en ponerse en el

lugar hipotético de la propia vida

futura y las generaciones

pasadas.

Es elegir no hacer o decir

nada que pueda mancillar

el honor o reputación de

alguien.

Cuando se acepta que se

comete un error o

equivocación y no culpar

nunca a alguien más por ello.

Reconocer los méritos ajenos y

más si parecen propios.

Realizar lo que nos

encomiendan aunque no

haya quien lo supervise

Decirle de frente a una persona lo

que se piensa de ella y nunca

hablar a sus espaldas.

Pagar las deudas aún sin que nos lo

soliciten.

Devolver a quien nos da dinero o

algo de más sin darse cuenta.

Devolver el dinero o los objetos que

se encuentren y tengan dueño.

No engañar a los clientes con

publicidad engañosa.

Decir la verdad aunque cueste

trabajo admitirla o nos cause

consecuencias negativas.

Devolver lo que nos prestan aún

cuando no nos lo hayan pedido