Guía para el Tratamiento del Paciente con Diabetes:

UNA CAJA DE HERRAMIENTAS

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Modelo Tripartita

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Modelo tripartita para el cuidado de los pacientes con Diabetes tipo 2:Médico(a) - Enfermero(a) - Promotor(a)

Ya desde la Declaración de Alma-Ata, emitida en la Conferencia Internacional sobre Atención Primaria de Salud, celebrada en Kazajistán en 19781, los países reunidos convinieron en la “necesidad de emplear un nuevo enfoque en la prestación de servicios de salud, con el objeto de extender la cobertura de los mismos a las comunidades más necesitadas del mundo.” Dicho enfoque involucra a los profesionales de la salud, las autoridades que definen las políticas y, en general, a todos los sectores responsables del desarrollo de un país, en donde la salud y la educación juegan un papel importante para el logro y mantenimiento de una población sana y productiva. En esta declaración, se hizo patente la necesidad de que los miembros de la comunidad se conviertan en motores del cambio para que, en lugar de ser receptores de los servicios de salud, se conviertan en seres responsables y comprometidos con su autocuidado y mejoramiento de calidad de vida.

Un grupo clave identificado en la población, es el de los promotores de salud, cuya función educativa no formal, ha venido a impactar favorablemente en la prevención de las enfermedades y en el fomento del bienestar Integral.

Los promotores son personas voluntarias, generalmente sanas o que padecen alguna enfermedad controlada, que eventualmente reciben incentivos mínimos, pertenecen a una población con la que comparten experiencias culturales y socioeconómicas similares y que han recibido capacitación para dar información correcta sobre cómo prevenir y controlar las enfermedades para mantener un ambiente saludable, así como llevar a cabo tareas elementales de asistencia médica. Representan un puente de comunicación muy importante entre la comunidad y el sector salud, siempre bajo estricta supervisión.

El Ministerio de Salud del Perú2 ha definido al promotor como “un líder de la comunidad, comprometido, elegido por ella e integrado a su organización, que realiza acciones integrales mínimas de salud y de desarrollo, previa capacitación y la consiguiente asesoría, supervisión y control por el sistema de servicios de salud y la organización comunal.”

La función del promotor dentro de un equipo de salud ha venido a incidir favorablemente en el modelo tradicional de salud centrado en la atención del paciente por el médico y enfermera, modelo que deja a un lado la complejidad del binomio salud-enfermedad.

Por lo anterior, para el desarrollo del proyecto Dulce Wireless Tijuana (DWT), se decidió utilizar el Modelo tripartita para el cuidado de los pacientes con Diabetes tipo 2: MÉDICO(A)-ENFERMERO(A)-PROMOTOR(A), en el que la tecnología inalámbrica representa el espacio de oportunidades para mantener una mayor comunicación y mejor control de los pacientes, así como continuar a través de los teléfonos celulares proporcionando avisos de alarma, mensajes y videos educativos.

El modelo incluye una combinación del manejo de casos por un equipo multidisciplinario guiado por médicos, médicas, enfermeras y enfermeros, especialmente capacitados y el componente importante de educación comunitaria ofrecida en sesiones educativas por promotoras y promotores también previamente capacitados para lograr el autocuidado efectivo en el paciente con Diabetes tipo 2 y su familia.

La capacitación del personal médico y de enfermería, está basada en las guías prácticas propuesta por la Asociación de Diabetes Americana (ADA). El personal de enfermería entrenado en atención del paciente con Diabetes, tiene un papel muy importante en el manejo del paciente y en su educación.

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1 Organización Mundial de la Salud. The Alma-Ata Conference on Primary Health Care. WHO Chron 32(11):407-458, 1978.2 Perú. Ministerio de Salud. Escuela de Salud Pública del Perú, Dirección General de Programas de Salud. Modelo normativo para la capacitación de promotores de salud. Lima, 1979. 2. Patton, M. Q. Qualitative Evaluation Methods. Beverly Hills, Sage, 1983. 3. Spradley, J. J. The Ethnographic Interview. New York, Holt, Rinehart and Winston, 1979.

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Modelo tripartita

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En este modelo el médico(a) y enfermera(o) establecen una mancuerna para dirigir el tratamiento del paciente mediante educación personalizada y su canalización a un siguiente nivel de atención dependiendo de las necesidades del paciente.

A la enfermera se le permite la toma de decisiones clínicas sustentadas en la capacitación recibida y complementada con la labor directa del médico. Fundamentalmente sirve de enlace con el promotor comunitario para que el paciente se integre a las clases y a los grupos de apoyo, dando seguimiento y monitoreo del cumplimiento de objetivos y metas específicas que cada paciente establece desde el inicio de su participación.

A su vez, el promotor comunitario se encarga de impartir las clases a los pacientes con diabetes y a sus familiares, las que están enfocadas a lograr el autocuidado efectivo en el manejo de la Diabetes tipo 2. Las clases son sesiones interactivas con base en el Currículum Diabetes entre amigosTM, en donde los pacientes discuten sus experiencias personales, mitos, creencias y temores respecto a su enfermedad y reciben la orientación educativa por el promotor.

El periodo intensivo de la intervención educativa comunitaria es de dos meses con asistencia semanal a las clases y posteriormente se ofrecen reuniones mensuales a manera de grupos de apoyo.

Además, los promotores tienen el compromiso de ofrecer visitas domiciliarias para aquellos pacientes con condiciones especiales, como es el caso de identificar falta de adherencia al tratamiento o difícil acceso a los servicios médicos o educativos. Una función muy importante del promotor es el de mantener al paciente con motivación para el autocontrol de su diabetes, así como promover el cumplimiento de las citas con su médico y enfermera, y las indicaciones clínicas del equipo de salud.

Durante todo el proyecto, se mantiene una comunicación estrecha entre médico(a), enfermera(o) y promotor(a) de salud.

Fig 1. Modelo tripartita para el cuidado de los pacientes con Diabetes tipo 2: Médico(a)-Enfermero(a)-Promotor(a), en el proyecto Dulce Wireless Tijuana

Fig 1. Modelo tripartita para el cuidado de los pacientes con Diabetes tipo 2: Médico(a)-Enfermero(a)-Promotor(a), en el proyecto Dulce Wireless Tijuana

Paciente con Diabetes tipo 2

y su familia

Promotor(a)Médico(a) Enfermero(a)

Modelo tripartita

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Se hace hincapié en la importancia de las promotoras, en donde la identificación del personal que se va a preparar para su función de promotoría es clave para el éxito del proyecto.

Como ya se mencionó previamente, las promotoras de salud son un grupo de voluntarias capacitadas como educadoras en salud y forman un enlace vital entre los médicos y la comunidad.

El Proyecto DWT cuenta con la colaboración de promotoras de salud quienes están capacitadas para ser efectivas educadoras en Diabetes y enlaces entre el paciente y el equipo médico en la clínica.

Se recomienda que las promotoras de salud seleccionadas para este proyecto, sean personas con una experiencia cercana y personal con la diabetes (pacientes o familiares) y que sean líderes en su comunidad. Tienen que ser capacitadas en el modelo educativo que se elija, en el caso del proyecto DWT fue el de Diabetes entre amigosTM durante un periodo de 6 meses, en el cual asistieron a clases semanalmente y obtuvieron su constancia de educadoras en diabetes con base en el currículum antes mencionado.

Son las promotoras que acreditan el curso antes mencionado, quienes se convierten en facilitadoras de las 8 sesiones que se imparten a los pacientes con Diabetes tipo 2 reclutados para su abordaje integral. Además al inicio se les imparte a los pacientes una sesión para el dominio de la tecnología; es decir cómo manejar adecuadamente el glucómetro y las aplicaciones del teléfono celular.

Es importante que las clases se impartan en lugares accesibles y convenientes.

Las clases son sesiones interactivas donde los pacientes también discuten sus experiencias personales, miedos y creencias acerca de la diabetes. El periodo intensivo de la intervención consiste en dos meses con participación semanal a las clases de auto cuidado de la diabetes. Después de este periodo intensivo de educación, se ofrecen reuniones de grupos de apoyo mensualmente, en las cuales se realiza un recordatorio de los temas vistos en clase, además de profundizar en los temas que así lo requieran. En estas reuniones mensuales se organizan clases de cocina saludable, zumba, activación física, sesiones grupales de psicoterapia, juegos de conocimientos sobre la diabetes, etc.

Se debe contar con el apoyo de una “educadora de educadores” en diabetes certificada por el Scripps Whittier Diabetes Institute para estar actualizando de manera permanente a las promotoras y estar presente en todas las clases para apoyar en el buen desarrollo de la misma.

De gran apoyo es la presencia de un personal médico(a) capacitado con conocimientos y experiencia en nutrición, quien profundiza en el tema de “nutrición básica” con las promotoras y pacientes.

También es función de las promotoras como ya se mencionó previamente, realizar llamadas telefónicas a todos los participantes para recordarles de su asistencia a su clase semanal/mensual, lo que genera un ambiente de confianza y apego hacia su educadora en diabetes.

En resumen, el papel de cada uno de los miembros del modelo tripartita de atención del paciente con Diabetes tipo 2 es muy importante para poder brindar un abordaje integral con calidad y calidez; sin embargo, hay que reconocer que la promotora es el eje motriz que soporta la eficacia, la eficiencia y la efectividad del proyecto.

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