un cuento callejero

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La soledad. Dos jóvenes adolescentes destraban sus inquietantes verdades.

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UN CUENTO CALLEJEROUna pendeja gorda vomita su FernetCola en la esquina. Una amiga le hace el aguante. Mira hacia todos lados, disimula. Quisiera poder decir No la conozco...solo tomamos unas copas juntas en el Bar La Morondanga hace unos minutos y ahora se me descompuso ahi! La vergenza le corroe la minscula simpata y la pena por su amiga en cada arcada ruidosa seguida de un negro splash plstico sobre la acera. Una banda de piratas adolescentes las miran desde el kiosco. Se ren cada vez que la gorda larga los chanchos. La bardean:-Eh Gorda....deja de ensuciar la calle!-Gorda!..Tirate un pedo que pagamos los destrozos!La gorda llora y vomita. Los mocos le caen como mbar.Su amiga no es gorda. Es linda y lo cree. En su mente la traicin hace un nido con recetas del Para Ti y la Cosmo en finas tiritas y tampones y consejos de mam-pap y el horscopo de Clarn y ositos de peluche regalados por novios pajeros que alguna vez se la cojieron y ella no sinti nada. Pero es linda, segn le dicen el espejo y el deseo de los otros y la polaroid de la felicidad y no esta dispuesta a soportar un minuto mas de esta humillacin publica por esta gorda estpida que no sabe chupar ni alcohol ni la pija, segn el comentario de Emiliano que se la hizo mamar en la fiesta que organizo El Pollo cuando los viejos se tomaron el palo a Mar del Plata.- Te sents bien?- pregunta hipcrita, hija de puta a sabiendas, de lavamanos.La respuesta de la gorda es un chorro negro de bilis y fernet que se estrella contra el capot de un automvil estacionado. Es un asco!, piensa la Linda, que es rubia teida y se imagina a si misma pegandole patadas en las costillas a la gorda tirada en el suelo enmierdada hasta el cogote de su propio vomito. Una pizca de su porquera logr salpicarle el jean. Le pega y le pega en el teatro de la crueldad de su mente. Se ve en cmara lenta, su pie penetrndola a la altura de la grasa acumulada en su vientre. Ve los ojos escapando de sus rbitas como planetas colisionados. Sus ojos colgndole de unos jirones rosados la miran desde las baldosas y ya no desde la cara de la gorda. El sueo se interrumpe cuando el radar de su mirada detecta la gorra de un cana que asoma en la esquina donde estn los pibes que ahora disimulan y se dispersan.- Luli - le dice con aire ausente a la Gorda - Rescatate que viene un cana...La gorda sentada en el cordn de la vereda esta llorando.- Tenes un pauelo ?La gorda sacude la cabeza: no tiene.El cana ya las vio, pero no hace nada, se queda fumando y hablando con la kiosquera. La kiosquera lo mira y asiente pero no se re ni muestra signos de verdaderamente ser parte de la humanidad. La kiosquera piensa en su perro que ahora esta solo en su departamento destrozndole los almohadones y cagndole la colcha de su cama en venganza del desamor y la canallada de sobras de fideos cidos de tuco en lata que le hacen perder el pelo a raudales sobre su alfombra persa de nailon.La gorda se esta quedando dormida y la linda trata de que se ponga de pie y rajen de all.- Sal guacha! - le grita la gorda manoteando en el aire un cachetazo que no da en su blanco y que la hace caer de costado sobre la vereda y resbalar frente al .- Mira lo que haces imbcil, borracha de mierda ! - le grita la linda- Yo te quiero ayudar...me quedo con vos...y...y- Sal Puta! - le vuelve a gritar la gorda desde el piso, con la remera de The Cure manchada irremediablemente de panchos y FernetCola rancios. - Puta!...Puta de mierda!- Luli..no me insultes mas y mejor parate y vaymonos a tu casa...te acompao...no seas boluda.- Puta!...hija de puta...- grita nuevamente la gorda- Te cojiste a Emiliano...sabias que me gustaba y te cojiste al Emi...Trola de cuarta..mala amiga!Negar, siempre es le mejor solucin, la mejor respuesta al apriete. Cmo se haba enterado? Y, la culpa era suya por contarlo a las envidiosas putarracas que habian querido colocrselo al Emiliano todo el ao y nada. Al fin y al cabo Dios le haba dado ese culo y esas tetas redonditas y deliciosas para algo y a esas putas de cuarta no. Ni hablar del paty grasiento que tiene enfrente.- Te volviste loca! - le dice en un grito proferido en voz baja- Emiliano?..si me da asco! -miente- Jamas dejara que me toque un pelo.-Miente- Te volviste loca vos?Emiliano chupndole las tetas. Emiliano acabndole en la boca su miel picante y espesa. Emiliano hacindole el culo como ningn otro pelotudo se lo haba hecho y llenndoselo de leche tibia una y otra vez. Jamas hubiera dejado que le acabe en la concha. Eso de quedarse preada era para las pelotudas de la villa, no para ella. Y esta gorda imbcil quera cojerselo...ja! El turro hizo que le chupara la pija en una fiesta, re-borracho que ni se le paraba, le contaba..ja.- Dale boluda...levantate y vamos...te mintieron...para hacerte pelear conmigo que soy tu mejor amiga...dale!La gorda tiene ganas de creerle pero sabe, siente (sinti) el olor de la pija de Emiliano en la mejilla de esa puta cada vez que le dio un beso esta semana. El colegio entero sabia que la puta se lo haba garchado porque ella misma se encargo de repartirlo por todos lados. Ufanndose. Ventilndolo a los cuatro vientos que se haba garchado al lindo, al prncipe, al amor de su vida Emiliano, al ngel de cuarto primera. Que ganas de fumar, carajo!- Dame un cigarrillo Puta ! - le dijo a la linda.- Sabes que no fumo Luli!- Entonces anda a comprarme, puta!La linda la mira un instante y ofendida se cruza hasta la esquina y le pide a la kiosquera unos Malboro box, los paga y vuelve a donde quedo su amiga que ya esta recuperando las formas y al menos esta sentada en el cordn otra vez. Le pasa el paquete de cigarrillos y unos fsforos.- Trajiste cerveza? - le dice la gorda mientras enciende un Malboro.La linda la mira incrdula.- Te cojiste a Emi y no me podes traer una cerveza? - le reprocha la gorda.- No te digo yo que sos una puta mala y una hija de puta..?- Basta de insultos, Luli! - le dice la linda.- Puta!- Me voy eh? Te las arreglas como podes! eh?- Conchuda roba novios !- Te lo dije...-le dice la otra arreglndose la blusita y ordenando la carterita y buscando unas monedas para el colectivo - Me voy!- Sorete roba-novios...Puta! Si vos no lo queras...La linda se da media vuelta y encara para la avenida a pasitos largos y firmes, sin culpa, sin mirar para atrs. La gorda la ve alejarse y se queda sentada bajo las estrellas de la noche, sola.La Metropotamia va quedndose desierta. El cana se ha ido y la kiosquera tiene ganas de cerrar pero no puede. Maldice su vida e imagina al perro durmiendo sobre los sillones dejndolos llenos de pelos cancergenos.La gorda logra llegar a los tumbos hasta el kiosco. Encara pidiendo una petaca de vodka, la mas barata. Al sacar la plata de su mochila se le caen unas monedas que corren hasta una maldita alcantarilla y se pierden para siempre. Paga y se regresa a su bunker a cielo abierto de la vereda. Trata de ver la hora en su reloj pulsera pero no logra hacer foco. Ve solo la mancha redonda y brillante bajo la luz del mercurio y un brazo doble que no acierta a quedarse en un solo lugar.Abre la petaca y al abrirla el crac del sello metlico se escucha en todo el universo del barrio y del parque Lezama all atrs a sus espaldas, crecido por sobre cientos y cientos de cadveres de negros de la Fiebre Amarilla. Un perro ladra a lo lejos. Algunos colectivos pasan a la velocidad de la luz en Almirante Brown, dejando tras de si una estela de gasoill quemado y desamparo. Es viernes y algunos hombres estn armando los stands de los falsos artesanos que como araas intentaran atrapara idiotas y vender su mercadera adquirida en los sucios rincones del barrio del Once.La gorda toma un largo trago de la petaca de vodka. El liquido penetra su esfago en llamas, incinerando su estomago, clavndole agujas en la cabeza y provocndole una arcada seca y lagrimas.- Puta de mierda - dice en baja voz secndose la boca con el dorso de la mano.- Si no lo quera...no lo quera y yo si...yo lo poda hacer feliz....Entends Puta?La gorda se echa la mochila al hombro y se pone de pie a los tumbos. Los hombres armando los stands ni la miran cuando ella pasa atravesando el sendero hacia dentro del parque. Solo es una pendeja mas, una borracha mas en una maldita noche de viernes. Solo una puta pendeja borracha llena de vomito y con la pintura corrida. Uno de los pibes la mira adentrarse en la oscuridad del parque y la sigue sin que nadie se de cuenta.La gorda camina haciendo eses y se detiene y grita Puta al aire de la noche y continua el derrotero hacia la balaustrada que esta al lado del museo. Al llegar all observa el paisaje y le da un trago largo a la petaca. Siente nauseas.El pie la observa desde detrs de unos arboles. La gorda oscila.El pibe se le acerca sin hacer ruido y la encara. La gorda lo mira desde ningn lugar. A esta altura no habla, no sabe hablar. solo balbuce algn insulto ininteligible. El pibe le pega una trompada directa a la mandbula y la voltea de una. La gorda se queda tirada en el piso a la sombra.- Quedate tranqui, pendeja- le dice el pibe- No te va a pasar nada...La gorda agarra su mochila y quier ponerse de pie.El pibe le patea los pies y la gorda va a parar al piso de nuevo.- Quedate piola nena! - le dice el pibe.La gorda siente como el pibe le levanta la pollera mugrienta y escucha el tintin de las cadenitas que cuelgan de su cinturn. Siente el metal fro de un cortaplumas o una navaja que le destroza la bombacha que es arrancada de un golpe por las manos del pibe que la esta atacando. No puede hacer nada. En realidad se da cuenta en su pedo atmico que no quiere hacer nada, que no le importa hacer nada, ni gritar ni nada. Lo deja hacer. El pibe a las apuradas se baja los lienzos y se le tira encima por la espalda apretndola contra el piso. La gorda siente la pija dura del pibe buscando un orificio cualquiera para entrar. La siente caliente y dura y grande. Se la imagina echando humito en la noche. La gorda siente como las manos del pibe le abren las nalgas y entonces siente el ruido de la escupida y el calor de la saliva chorrendole por el culo y el dedo del pibe embadurnndola de saliva.- As gordita...quedate piolita as - le dice el pibe.No le gusta que la llame gordita. Siente las manos del pibe desgajndola violentamente y entonces siente ese otro fuego penetrndole el culo desgarrndole el culo que arde y le hace gemir de dolor y de miedo un poquito y siente ese pedazo de carne humeante en la noche abrirse paso dentro suyo y siente que el pibe le escupe otra vez y la vuelve a penetrar como si estuviera explorando su interior con un pepino, golpendole repetidas veces las nalgas con las bolas hasta que de repente siente con un infinito deleite el semen del pibe abrindose paso en la descarga por su interior,buscndola a ella, a su corazn, sin hallarla pero al menos intentandolo. Siente el jadeo leve y el quejido del pibe al acabar.- Te amo Emiliano...te amo....- le dice la gorda.El pibe se pone de pie rpido y se sube los pantalones. Mira hacia todos lados para buscar miradas indiscretas y delatoras. No ve a nadie y sale corriendo perdindose entre la espesura de la noche del parque.La gorda se queda tirada en el piso de nalgas al cielo, chorreando el semen del pibe.- Te amo Emiliano...te amo- dice llorando.