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Un café con la muerte (Una charla pendiente) Prólogo Desde los tiempos de “Onírica, tierra de exilios”, llevo en mi la necesidad de darle mejor destino a aquel encuentro en esa bella comarca; en ese Bar llamado “Tachame la doble”. Paradójicamente, lo que aquel personaje tiene para comunicar, para describir, y para sentenciar, está más vinculado a la vida que a la muerte misma, tomada así…como cosa física.

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Un café con la muerte(Una charla pendiente)

PrólogoDesde los tiempos de “Onírica, tierra de exilios”, llevo en mi la necesidad de darle mejor destino a aquel encuentro en esa bella comarca; en ese Bar llamado “Tachame la doble”.Paradójicamente, lo que aquel personaje tiene para comunicar, para describir, y para sentenciar, está más vinculado a la vida que a la muerte misma, tomada así…como cosa física.

El realismo mágico de la novela en cuestión, su estremecida vivencia reparadora, sus códigos casi extintos, toda su expresión sensible me reclama (como un hijo insatisfecho) que tal condición no quede condenada al silencio.

Me dispongo así, aún sin las posibilidades que debería tener para tal tarea, a “traer”

nuevamente a quien ha manifestado haber tomado la tarea de personificar la muerte misma, para que su aguda visión, entre melancólica y digna, para que (al fin) diga lo que tiene que decir y de ese modo pueda (yo) quedar a mano con tal designio.

Conciente como estoy que pueden asomarse a estas letras quienes no hubieran leído “Onírica….”, empezaré por transcribir aquel encuentro primero, en aquella noche tormentosa y hostil, con la visión mágica y difusa del “Tachame la doble”.

Espero, secretamente…como es todo el anhelo que se esconde bien dentro de todo creador de ficción, espero que mi estatura literaria permita la humana, que sin duda intenta con dignidad este texto.Espero que sus contenidos sensibles cobren vida propia y vayan más allá de mi por el mundo, que su furia y pasión infinita me reconozcan también.

Que alcance a quienes debería alcanzar, con la suavidad que siempre es mi modo, una suavidad que no da concesiones ni tiene medias tintas, que no va por la superficial manera formal al modo “no rozar a nada ni nadie”; sino con toda la contundencia que esa sensibilidad misma tiene para exhibir y dar, justamente por eso, porque no palmea las espaldas de la mediocridad y las indignidades, sino que intenta evocar lo digno y valiente para vivir….aún cuando eso mismo estuviera condenado hoy.Daniel Pereyra. Junio 2014

I

Un café con la muerte

(Aquel primer encuentro, en Onírica)

De regreso ya, algo cansado, con más sorpresas y misterios de esta tierra colorida….de sus encantos cotidianos sin parar nunca…..de nuevas emociones y viejos jirones de uno mismo que aquí, en Onírica, se vuelven vida para siempre….esta tierra sin olvidos…para olvidados.

Sabía bien que estaba lejos de mi casa, el día había sido largo, tenía la certeza de no llegar antes que el sueño me venza, me dispuse a buscar un lugar a la luz plena de esa luna siempre en creciente que ilumina todo desde lejos, como aquel que espía esta comarca sin atreverse a entrar.

Justo cuando veo un recodo con buena arboleda y mucho humus que invitaba a tirarse….se iluminó todo el cielo con unos relámpagos enormes, con lejanos rayos….nunca había visto una tormenta desde mi llegada….y rápido, sin que pueda siquiera disfrutarlo, se largó una inmensa lluvia torrencial que me obligó a correr buscando refugio.

Me dirigí a una frondosa arboleda que, por sus copas tan tupidas, dejaba apenas caer el agua.Mientras, todo luz con los relámpagos y todo estruendo….

Me cubrí como pude y no dejé de correr por varios minutos, me preguntaba: dónde dormiría esa noche, a la intemperie y con tanta lluvia?

De ponto, la fila de altos Paraísos terminó, me detuve como quien evita caer en un precipicio al que, sin verlo a tiempo, se presenta en un instante.Había una construcción allí delante, una tenue luz se dejaba ver filtrándose desde dentro.Era algo así como una esquina sacada de los barrios más viejos del sur de Buenos Aires, de Barracas, de Patricios, de Pompeya, de la Boca…..

Una construcción raída….descascarada.Una esquina que parecía perderse a ambos lados de las inexistentes calles que la rodearían….Con los relámpagos alcancé a leer en su frente, lo que quedaba legible en él:

“Tachame la doble”Bar

Tenía el cabello empapado, el rostro lleno de gotas que corrían por mi cara….Me parecía como una imagen fantasmagórica, ese frente tan descarado, abandonado, raído….Y la lluvia que arreciaba sobre sus muros lo hacía aún más misterioso.

No tenía opción, con todas las dudas y temores me acerqué para entrar, después de todo podría guarecerme allí hasta que cese la lluvia.

Al acercarme pude ver que no era que su puerta estuviera abierta, con lo que yo podía apreciar la luminosidad de dentro; no tenía puerta!Me puse a uno de los lados de su entrada, como quien lo considera una vez más, por todos los temores…..y noté que se oía, entre los estruendos de la tormenta, sones de bandoneón y de violín…que eran para mí la mejor invitación a entrar.

Podía reconocer, aún desde fuera, empapándome, el preludio musical de “Garúa”, ese bello tango de tantas veces…ahora con algún sentido mayor…por la abundante mojadura.Al fin me decidí a entrar, con más deseo de secarme que temor íntimo.

Una vez en su portal, de alta puerta cuando debió tenerla, tuve que acostumbrar mi vista a la penumbra para divisar algo coherente…Viejo, húmedo, de la cría arrabalera tan nuestra, pensé.No me parecía ver a nadie en las pocas mesas que se veían….al fondo se divisaban algunas sombras, de donde parecían venir los sones musicales.Me decidí a entrar más aún, con timidez y torpeza….

Me senté en una de las mesas cercanas a la entrada y me sequé como puede con una gran servilleta de tela que cada una parecía tener.

Pronto se me acercó un mozo, un anciano vestido con su guardapolvo blanco, algo gastado, de los mozos de antes._Señor?- me preguntó inclinando su cabeza en mi dirección….._Un café!- le dije…..y mi tono fue más bien de ruego…..por la mojadura.

A cada resplandor de los relámpagos, la escena interior de aquel Bar tan misterioso, en medio de esta comarca tan inquietante, donde parecía todo posible; en cada resplandor, podía ver algo mejor todo el interior de aquel Bar…..Las paredes plagadas de cuadritos enmarcados con los equipos de futbol, de todos los tiempos, los banderines muy sucios y ajados….las fotos de las orquestas de tango, de sus cantantes…..En lo alto lleno de repisas con botellas, muy sucias, de aperitivos, de vinos….todo como quedado en el tiempo.Puse mi atención, en el próximo resplandecer de la tormenta para ver los “músicos” que desde lo profundo del salón seguían con los acordes de tango….tan bello en el quejido ahogado del bandoneón y el melódico “cortar” de un violín.

Sólo dos….ensimismados en sus instrumentos, con ojos cerrados, metidos hacia dentro…..y su música que me calmaba.

Yo estaba mirando hacia la puerta, viendo como se descargaba la tormenta, mientras esperaba con ansias la llegada de mi café….A mi izquierda, sobre la ventana que da a la ochava de ese lado, en una mesa…”alguien” que se inclinaba pesadamente hacia su copa pequeña, con ropaje nutrido y avejentado, tomando con su mano esa copita como con fuerza, como cuidándola que no se caiga…..apretándola hacia si.Más allá, en su mesa, una botella de caña me pareció divisar, a medio vaciar.Con un sombrero de ala ancha, negro, volcado hacia delante que apenas se podían ver los rasgos solamente del mentón, la boca apretada y apenas su nariz.

El único parroquiano pensé, pero me alivié de saber que no estaba sólo allí, que alguien más había arribado a ese sitio.Al fin, mi café.El anciano se acercó lentamente, la atmósfera hacía todo más cadencioso, se movía como a la melodía cansina de los instrumentos, de su sonar suave y melancólico._Señor….. - me dijo con ademán gentil- su café!

Tomé el pocillo con desesperación, su calidez me dio sensación de paz….y el primer sorbo me llevó esa paz muy dentro.

No terminé de apoyar la tacita en la mesa que vi que esa persona que estaba allí, en la mesa de la ochava, se levantaba pesadamente y con decisión, con la botella de caña en una de sus manos y la copita en la otra; se acercó con firmeza y resolución hacia mi y se sentó sin pedir permiso siquiera._Qué noche!!!!! - exclamó a modo de saludo._Si, de lo peor - alcancé a decirle para no sonar odioso.Mirando hacia el fondo del salón, levantando la voz, una voz muy grave y firme, ordenó: _Cachito, la de Trepiana dale… -y el bandoneonísta comenzó con esa melodía bellísima que también pude reconocer._Es de lo mejor - me dijo como explicando la situación, con tono campechano._Los traje conmigo, fue la única condición que les puse! - me dirigía esas palabras como si yo estuviera al tanto, como si supiera de aquello que hablaba._Mi trabajo necesita, cada tanto, una copita y unos buenos tangos - y desprendió una sonrisa nada exagerada, más bien irónica consigo mismo.Su tono era como de “disculpa”, más bien de un grado de explicación culposa, porque meneaba su cabeza en ademán negativo al pronunciar esas

palabras, como quien no desea ser juzgado a la ligera.

Volvía a servirse de la botella, a su copita pequeña y sin soltarla; a veces tomaba su trago de un solo sorbo, a veces se daba un espacio para saborearlo más…como siguiendo la intención de su charla._El del bandoneón es Cacho, sabe cada tema, sabe bien el tono que me gusta, que necesito - me seguía explicando sobre los dos músicos allí en la penumbra del salón, bien dentro._El del violín es el “fino” Marcos, una exquisitez de melodía - terminando su explicación como al pasar._Me los traje, te dije ya eso? - volvió a comentarme con la sensación de algo ya dicho que, efectivamente ya lo había dicho, como sabiendo de una dificultad para recordar, suya, ya detectada._Si, ya me lo dijo - le alcancé a decir con timidez._Pero…..este muchacho…ni me tutea - y estalló en una risa plena.

Este parroquiano me daba cualquier sensación menos aquella con la que sentimos la posibilidad de tutear a alguien, tenía una gran presencia, a pesar de su raída y desgarbada figura. Había autoridad en él, no sabría como explicarlo, imponía decisión, autoridad.Sentado frente a mí, de espalda a la entrada del Bar, los resplandores de la tormenta lo iluminaban de atrás, eso hacía que su rostro permaneciera algo

oculto para mi vista, apenas el mentón, la primera parte de su nariz, su boca de labios apretados….El sombrero de ala ancha, bien negro aunque muy gastado, le cubría la mirada, su encorvada manera, hacia delante, su cabeza algo gacha…..su decir con seguridad, su tono campechano….diciendo como al descuido…como dando sobreentendido su entendimiento.

_Usted…a qué se dedica? - le pregunté para aclararme lo dicho previamente por él._No querrás saberlo…..jajajajaj - estalló al decirlo en una enorme carcajada que dejo ver cierto brillo de sus ojos al estirarse hacia atrás para reírse._Cachito!!!!- exclamó mirando hacia dentro del salón girando su cabeza - dale hermano…..”Por la vuelta” - y volvió su rostro hacia el centro de la mesa al escuchar los primeros acordes del bandoneón tocando ese bello tema._Si no los tuviera…….. -dijo como para sí, dejando esas palabras colgando._Una copita? - me preguntó alzando la botella de caña.Yo había terminado mi café de dos sorbos que ni podía recordar; la mojadura, la corrida, este Bar….hicieron que ni registre su sabor.Sin que pudiera decir siquiera que si, se apuró a pedirle al anciano _Otra copita para el señor…..-

Se volvió hacia mí, como quien está a punto de confesar un secreto; con ademán cómplice, en tono bajito, haciendo un gesto, con su mano aún con la copita entre ella: _No estaba previsto que nos encontremos….. -hizo una pausa como para considerarlo mejor, como eligiendo las palabras y agregó - AÚN!_No lo entiendo - le dije con tono de fastidio, me molestaba su seguridad hacia mi, no había razones para ninguna intimidad._Sé que no podés comprender…pero un día entenderás! - no esperó siquiera un mínimo de admisión en mi…..tomó la copita que había traído el anciano y la llenó de caña, de esa botella que parecía no terminarse._Tomate un buen trago, esto lo cura todo!!! - y esbozó una breve sonrisa que brilló un poco con un nuevo relámpago._Qué nochecita!!!!!! - volvió a exclamar girando su cabeza hacia la entrada. _Sabés….yo también tenía sueños….. - ahora su tono había cambiado de repente, y la cadencia de su voz se hizo una con el tono del violín que el “fino” Marcos hizo sentir en primer plano._Cuando todo aquello se dio así….bueno, vos me entendés no?....cuando ella se fue….ya no quise más nada! - se fue apagando su tono más y más según avanzaba su decir, no se quebraba su voz, se apagaba, y era como quien necesita mucho contar

algo doloroso, así, en un Bar, con un extraño….con una copa como cómplice compañía, como al pasar.Y mientras miraba por la ventana de la ochava, con su cabeza algo girada para tal fin, y murmuraba lo penoso del clima de esa noche, mientras me decía “qué nochecita” como remarcando lo evidente del tiempo malo, alguien, en su interior, parecía decir “que tristeza tan grande!!!!”

Tomé coraje, tal vez la caña ya empezaba a darme eso mismo que yo no tenía, a esa altura de la noche y todas las cosas que habían sucedido y le pregunté una vez más:_Pero….qué tiene que ver eso, de esa mujer….le pregunté a qué se dedica….. -trate de alcanzar alguna respuesta, me sentía con derecho a pedirla, no podía ser que todos me hablaran como si supiera._Cuando eso sucedió, como te decía, ya no quise más nada, ya nada me importó, tenía dos caminos….dejarme llevar por la nada…o llevármelos yo a la nada - se sonreía pero no desde dentro, sino más bien con irónica afirmación a su condición penosa._Perdón…..? - lo volví a interrogar con sólo esa palabra, ya que detecté su necesidad de hablar._Si……si - me dijo despacito como quien comunica un secreto que tiene sanción si es revelado._Si……., bueno…entonces es que tomé este trabajo, pero con condiciones, yo pensé que no me las darían, pero como parece que nadie lo

quería….jajajja al final me dijeron que sí…y acá estoy, con mi cañita, con Cacho y Marquitos…..si no fuera por ellos….. - era muy agradable su manera, te hacía sentir con calideces que venían desde muy dentro de si, nadie podía sospechar siquiera su real “oficio”, daba algo de gusto, en medio de una noche así, su charla cómplice.

Hicimos un extenso silencio, estaba como considerándolo, como quién mide si las palabras dichas (y las por decir) estaban bien…si no fue un exceso en la “confesión”._Vos sabés… - volvió a decirme mientras me servía una nuevo trago, y como si yo efectivamente supiera- saber que todos te temerán…que no querrán verte, que sos muy “malvenido” en todas partes…..que harás sufrir - por primera vez, al pronunciar estas palabras, soltó la botella de su mano derecha y apretó muy fuerte su puño, como quien siente una gran impotencia, mientras giraba la copita, ahora vacía una vez más, después de darle un sorbo amplio al decir todo esto.

En ese momento comprendí….no sé bien cómo…pero comprendí!Sabía que no podía decirme más, o más claro.Y sabía bien que había sido muy evidente ya, en exceso….un exceso que me daba cierta inquietud, temor a la vez, y que me halagaba con su confesión.

No volví a preguntarle….alcancé a detectarle una mayor inclinación en su cabeza, hacia abajo, como quien no quiere ser descubierto en su gesto al decir semejantes cosas, como con pudor….esta persona, con esta tarea…acostumbrado a las mayores durezas que enfrentar cada día…y con pudor. Sentí que esas mismas palabras estaban dichas desde muy dentro….y sabía que escondía, con su inclinación y su sombrero, una muy húmeda emoción.

La lluvia empezaba a amainar……Ya no se divisaban los rayos en el horizonte, los últimos relámpagos se habían ido lejos y apenas eran como un mínimo flash tembloroso._Se me ha hecho algo tarde - le exclamé, como pidiéndole permiso para dejarlo._Andá nomás…..falta mucho aún…..para tu mal jajajajaaj - descargó su carcajada como gesto de mutua simpatía, como el modo de compartido secreto, como indicando que ambos sabíamos lo que debíamos…..Y yo, junto a él….nos fundimos en esa gran carcajada común…..una que no podíamos detener!!!!!_Andá nomás….esto ya está pago! - de repente como frenando su risotada me dijo así, como volviendo a la conciencia de su destino _ Esta vuelta la pago yo….la próxima ya sabés……jajajaaj.

Me levanté con algo de pena, había estado muy buena esa charla, este lugar y la cañita muy dulce, claro._Esperá!!!- me dijo- esperá….. - primero como orden, luego, al darse cuenta, con tono bajito….._Yo te regalo este tango si vos me prometés algo….si? - y su tono era más de ruego que de pedido._Dale! - le dije al fin pudiéndolo tutear._Cachito…..”Fino”…….se va el muchacho….por favor “TU” - pedía para mi ese bello tango que tanto amé siempre…..a modo de despedida._Eso es lo que yo te doy a vos…está bien? - me preguntó como verificando mi gusto._Muy bien está!!!! - le dije con prisa._Bueno, ahora me toca a mi….._Si la ves…... - y por primera vez en toda la noche levantó su cabeza y me miró bien de frente a los ojos._Si la ves…. -hizo un profundo silencio, como tomando fuerzas para decirlo. Como sacando de dentro toda la angustia, una que precisaba de un esfuerzo de enorme valentía, siquiera para decirlo…._Si la ves……prometeme que si la ves, le hablarás de mi… - me miraba bien fijo, como suplicando con la mirada mi aceptación.Al decir esto último me había aferrado con su mano la mano mía, que aunque de pie ya, la tenía apoyada sobre la mesa.

_Lo prometo!!!!! - apenas pude pronunciarlo…tenía un fuerte nudo en la garganta….. - lo juro!!!!

Entonces dejo de apretar mi mano…sentí como todo su gesto se relajaba…como aliviado.Y mientras escuchaba los tonos maravillosos de “TU”, el quejido del bandoneón de Cacho, el filo del violín de Marcos…..salí de aquel Bar sin querer volver mi mirada atrás, había algo allí que me retenía, que si lo miraba de tan cerquita volvería corriendo.

Ya ni garúa se sentía….de repente todo estaba seco, como si nunca hubiera llovido, había hecho unos cien metros, una distancia que sentí como precavida para volver mi mirada….El Bar apenas se divisaba en medio de una muy densa bruma, una bruma que a cien metros no se notaba donde estaba yo parado….como fantasmagórica imagen que se desvanece de a poquito…..”Tachame la doble”….pensé como para mi……es bien justo su nombre.

(TEMBLANDOA poco de aquí,la tierra tiembla.Desde el fondo del océano...moviendo continentes.En cataclismo feroz,arrasa con la vida.....

Los días pasan.....y su replicar no cesa!Donde había llanura...ahora montañas.Donde estaba la playa,ahora el mar.Y donde estaba ella,ahora sombras.Y entre mis brazos de guerrero,se movieron sus arterias....se deslizaron sus tejidos,se apartaron sus dolores,se apagaron sus sonidos,para que desde el desván olvidadovolvieran los jazminesque allí fueron dejados....Y mientras aún sucede,mis palabras nunca alcanzan.....como no alcanzan los susurros,para calmar las inquietudes,mientras toda la galaxia....siente con asombro,como todo a su lado.....aún esta temblando!!!)

(Hasta aquí, aquel encuentro en Onírica)……………………………………………………….

Un amor perdido, una rendición anticipada

Nunca sabemos cómo suceden las cosas, pretendemos que es por casualidad o por designios mágicos.Ambas cosas reflejan nuestra fragilidad.Lo cierto es que, por aquello que prefiero llamar “misterio”, una vez estuve frente a esa mujer…..la de aquel que conocí en aquel Bar, aquella noche; cuyo nombre (ahora caigo) no conozco, y eso hace que no pueda comprender bien la razón por la cuál no le pregunté esa noche.

Cuando deje el “Tachame la doble”, lleno de confusas sensaciones a flor de piel en mi, la promesa que le hice a aquella persona (“si la encuentro le hablaré de vos”) sabía bien que eso no sería posible nunca….ni siquiera sabía quién era…su nombre, cómo identificarla, nada!Lo cierto es que, por algún motivo muy extraño para mi, pero compresible si pensamos de quién vino tal pedido, un día la tuve frente a frente…con toda la carga que ello significó.

Aquel día, en mi taller de pintura artística, entre bella música de Wagner y Strauss, me

preguntaba sobre ciertas cosas de las personas hoy, de todos nosotros.El frío había empezado algo tarde, pero traía ese atraso con la furia vengativa que suele tener el invierno crudo para los que no lo apreciamos.

No sé bien si fue toda esa atmósfera que me rodea siempre allí, los tonos que me absorben, los que se cuelan (también en mi mente y mi emoción) desde algún sitio aún no reconocido de mi vida o el cosmos mismo; todo ello llevaba consigo, al ver el pasar ajeno y concentrado de las personas por la vereda….como ajenas a si mismas….de tan dentro suyo que se las ve andar.Es un ejercicio casi cotidiano, como quien puede espiar desde un túnel vidriado, sin ser descubierto, hay algo en ellas que me dice mucho…aún cuando su pasar de largo nada registra de mi presencia allí.

“Todo, para nada….”, pensé de repente…… Esas preocupaciones, esos apuros….ese parecer saber a dónde ir….”todo, para nada”,, volví a pensar.

Un diminuto granito de arena….y vamos todos en él, en un viaje sin destino por el cosmos mismo, llevado por la fuerza irresistible de la gravitación, y apenas nos damos cuenta.Toda nuestra precaria condición, toda nuestra civilización, cada momento de la historia…..todos los que han venido a la vida, usado su tiempo y finalmente murieron.

Y mientras tanto, cada momento de secreta pasión….cada dolor, cada alegría….Los valientes y los cobardes….las acciones mas sensiblemente solidarias y todas las guerras…..Lo canallas y los que jugaron “su carta” por construcciones dignas y veraces…..Los que fueron consecuentes con los más abnegados ideales y los que calcularon sus vidas en dólares….Los oscuros seres para quienes el dolor ajeno, sus derechos e ilusiones de ellos fueron nada frente a sus necesidades destructivas; y los geniales artistas…..Todos albergados en ese diminuto granito de arena que viaja ciego por el cosmos, como en un océano infinito….todos en el mismo sitio, como iguales; el amor y el odio, la inclusión y

la bajeza….las dos caras de una moneda que no deja de caer.

Y los veo allí, pasar como si nada…mientras muy dentro se juegan las preocupaciones más grandes, los odios y los amores….todas las pasiones no extintas; la mezquindad calculada y los raptos de noblezas más excelsas.Se miran en mi vidriera….en el reflejo sutil de esos vidrios, se miran a si mismo, a considerar cómo lucen…..el modo en que la máscara permite un “prestado” de bellezas y dignidades, todas falsas.

“Todo para nada”, volví a pensar…..Como síntesis trágica de nuestra precariedad sin destino….Como aquellos que llevan la preocupación por sus diminutos asuntos entre sus ropas, mientras un cataclismo estalla allí mismo…en esa esquina a la que se acercan sin notarlo.

Y mientras, a la vez que trazaba los primeros tonos de un nuevo cuadro; mientras la música de Chopin desbordaba suave allí mismo….mis pensamientos se esfumaban con esos mismos

tonos violáceos, como si la pintura pudiera teñirse también de ellos.

Así fue que, sumido en todo ello, con las manos manchadas de pasión porque algo revelado muy dentro saliera la luz, sonó el “cairel” de la puerta y entró esa mujer…..para hacerme una consulta.

Alta, con todas esas condiciones recién descriptas…..cuidadosamente ataviada para verse de lo mejor, una ampulosa máscara muy cuidada….enseguida, al verla, pensé (al andar los breves metros hasta su presencia) qué bien cabía en aquella categoría tan común hoy.

_Buenos días- dijo con calculado tono bien firme, como aquel que sabe que debe aparecer con cierta cosa de seguridad para no ser descubierta._Buenos días….- le respondí sin mirarla del todo, como adivinando que mejor sería que no registrase que su saludo me llegó como quería._Te quería hacer una consulta…..veo que pintás, es así?- mis manos llenas de esmalte no eran la razón de su certeza, luego sabría que

había estado, por algún motivo, considerando mi tarea largo tiempo._Si…correcto, toda esta es mi pintura…- le respondí como al pasar, mientras trataba de sacarme el esmalte de las manos._Ah…pero qué bonito!!!!!- en una forma exclamativa que enseguida noté muy calculada, por su paso rápido por todas mis pinturas allí colgadas…._Si…bueno, mirá….yo quiero que me pintes un mural en mi habitación, tengo una pared plena sin nada y quisiera una pintura de este tipo para mi habitación- rápidamente, como un libreto muy leído, descargó con seguridad esas palabras para seguir- me gustaría que vinieras a verla, charlemos de los tonos, cómo sería….que se yo, que me des ideas!

En un segundo comprendí!Algo en ella, al decirlo, al mirarme mientras lo decía todo….había una clara marca de sensualidad que se colaba sutil, como parte de aquello que luego serían mis posibles honorarios._Bueno, es que yo- calculé milimétricamente cada pausa a decirlo- la verdad es que no trabajo a domicilio, no hago murales en pared,

los suelo hacerlos pero en una madera aplicable, del tamaño que sea, es mejor…se puede trasladar si uno se muda, se pude sacar para un arreglo, nunca se deteriora ni se pierde!

Noté rápidamente que buscaba, dentro suyo, algún argumento que compitiera con la contundencia de mi planteo…hizo una breve pausa, como esa persona muy ejercitada en dar vuelta situaciones._Ahhhh….claro, tenés razón si; bueno, sería el mismo caso, lo harías como me decís pero deberías venir igual para ver el lugar, no?- de ese modo casi instantáneo puso las cosas otra vez dónde quería, terminando la oración con una mirada muy directa y un imperceptible gesto en su boca._Si…claro, deberíamos ver cuando coincidimos para eso- no tenía opción, me había cerrado los caminos, nunca me gusta salir del taller, menos con frío….pero a veces no me dejan opción._Hoy de tarde podés…..yo llego del trabajo a las 18 hs, te dejo mi dire dale?- como quien no quiere esperas ni deja espacio para un no, descargó toda su idea ya definida mucho antes de entrar al taller.

_Bueno, dame….- anoté la dirección mientras ellas se acercaba nada sutil ahora hacia el papel dónde yo escribía…como un susurro muy próximo hacia notar su cercanía y su perfume._Bueno dale, quedamos así! No me falles que te estaré esperando!- al ver todo bien definido fue diciendo estas palabras finales mientras se acercaba haca la puerta como si estuviera apurada de repente._Ahí estaré!- alcancé a decirle….

Al cerrarse la puerta detrás sí, supe bien que algo más había allí, que demás consecuencias traería.Era una mujer de unos 50 años, con tono juvenil en su decir y en su vestir, con cosas que desmentían su edad…que se hacía evidente por debajo de su abundante maquillaje, algo raro había en ella….como cuando a alguien se le notan todas sus estrategias determinadas por más casual que haga su intento de disimularlo.Lo que no podía saber era qué! Y por qué! Por sobre todo, para qué…..?Con los años aprendí a ver a las mujeres, estas mujeres, no tanto en qué quieren mostrarte…y cómo quieren mostrarse, sino a desmenuzar su intención “estratégica”, el modo definido en

que su habilidad para detectar cómo hacer para obtener algo que quieren se ha hecho costumbre en ellas.

Seguí mi día como todos, cuando inicio un cuadro, tanto los tonos como el argumento va tomando propia vida….se impone a mi….que sólo debo descubrir tales cosas ocultas entre los trazos.

Al llegar las 18 hs, me dispuse para esa cita, mis manos a esa altura lucían muy manchadas, tuve que dedicarles tiempo y aguarrás para dejarlas limpias.A dos cuadras de mi taller, un muy moderno edificio, eso mismo me decía de alguien para quien lo material no es problema acuciante.Toqué el timbre de su departamento y contestó enseguida, como quien es superado por su anhelo._Si, vengo del taller…-y antes que pudiera completar la frase respondió…._Si Daniel….ya bajo!- y más inquietante fue porque enseguida noté que nunca me preguntó mi nombre, ni yo se lo había dado.

Esperé unos instantes y abrió la puerta del ascensor, ahora sin abrigo y con blusa muy escotada….nada casual, me dije a mi mismo._Hola, cómo estás!?- me dijo enseguida acercándose a darme un beso de saludo, uno que en la mañana en el taller ni intentó. Como si sus articulaciones estuvieran calculadas, planeadas, todo iba coincidiendo con la impresión que me dio hacía horas.Subimos a ascensor, un sitio por lo común de “encuentros no muy deseados”, incomodantes….Marcó el 5º piso y todo allí se inundó de un perfume de mujer recién aplicado._Estoy muy entusiasmada con este trabajo, me gusta mucho lo que pintás, quisiera algo que me represente!- era un borbotón de palabras, como un intento de no dejar que el silencio me haga pensar, y muy evidente.

Llegamos al fin….abrió la puerta de su departamento y todo lucía con poca luz, con ventanas cerradas, lo que era natural por el frío del día, pero algunas persianas también estaban bajas.Encendió la luz del living, todo era muy moderno, de la decoración algo “fria” de estos tiempos, con metal…cromados, nada que me

diera sensación de calidez. Todo eso desmentía, me dije, su aparente deseo de arte, menos aún el mío, lleno de tonos esfumados, que intenta calideces._Me estaba haciendo un café, recién llego y siempre necesito tomar café, te sirvo uno, dale?- su preguntar no tenía mucho espacio para un no._Bueno…..-antes de terminar esa sola palabra ya se había metido en la cocina, de la que efectivamente se sentía un sabor a café muy rico y penetrante.

Mientras esperaba, en el living, empecé a mirarlo todo más lentamente.Una seria de fotos en sus portarretratos, todo muy organizado….ningún niño, pensé, mientras las recorría todas.Al último, en un rincón apartado cerca de la mesa de comer, sobre la mesita del teléfono, pero cuidadosamente dada vuelta de un modo que no puede confundirse como casual, un portarretrato que por ese mismo motivo de estar “ocultado” a la vista de la foto, me llamó más la atención.Miré hacia la cocina, como para asegurarme no ser descubierto, lo di vuelta para verlo.

Entonces mi corazón se paralizó de repente, y mi respiración se cortó como para no seguir.Era la foto de alguien más con ella, foto que por su calidad manifestaba ser de otro tiempo…algo lejano….estaba ella, muy sonriente, y un señor que la abrazaba con gran calidez.Lo reconocí de inmediato!!!!Era él!!!!Aquel hombre que conocí en “Onírica”….aquella noche, en ese mágico Bar….era él!!!! Y llevaba el mismo sombrero negro de ala ancha.

_Es mi ex…..- traía una bandeja con los cafés, entró al living en el justo instante que yo estaba paralizado viendo ese retrato y sin poder salir de la confusión que me ganó al verlo._No sé por qué no tiro esa foto…..- volvió a decir mientras ponía la bandeja en la mesa- siempre estoy por hacerlo. -Y acercándose a mi, tomo el portarretrato y lo metió en un cajón de la misma mesita.A esa altura, no podía reaccionar….una sensación plena de confusión y necesidad de ordenar mis ideas se apoderó de mi.Esta mujer sería, pensé mientras ella sonreía y me acercaba el pocillo de café, aquella mujer de

que me habló aquel hombre; me había hablado sumido en un gran dolor…en Onírica, aquella noche.Tomaba en silencio su café, apenas me atrevía a mirarla ahora….Podía ser ella? Me preguntaba a toda velocidad en mi mente.Y ahora allí, frente a mi…como “casual” cosa del destino….Empezó a retumbar en mi, con cada sorbo, aquellas palabras finales de ese hombre…su pedido, su pedido.“Si la ves….le hablarás de mi?” Y mi promesa, mi juramento….uno que ahora no sabía si podría cumplir, sobre todo por ver la actitud que ella misma traía como “puesta”.

_Te gusta?- deslizó esa pregunta refiriéndose al café, mientras sugería otra cosa con su modo._Si está rico, gracias- le contesté lleno de incomodidad, una que creo que ella empezó a detectar._Pasa algo malo?- volvió a dirigirme su pregunta, tal vez intuyendo que yo dudara sobre ese retrato y su situación con tal persona, al fin…yo estaba ahora en su casa, no podía saber si todo eso era cierto y no fuera alguien

presente en su vida…y que eso mismo me trajera un problema._No, todo bien…..me pareció conocer a esa persona…..-le dije de inmediato tratando de hacer que dijera algo más sobre él._No creo que la conozcas….se fue ni sé dónde hace un tiempo…en realidad no es que me hubiera dejado, sino que entendió que aquí no tenía cabida, que estorbaba…..- dijo todo esto como con una dejo de perverso goce y una risa muy impostada._Si, me debo estar equivocando….la persona que se le parece es siempre alguien bien digno, alguien que no dejaría que eso pase -ahora era yo quien trataba de provocarla más, había notado que sus reservas de intimidad, en este tema, estaban muy bajas….que necesitaba decir._JAJAJA -exclamó muy incómoda- bien dignoooo…..jajajjaj, sin dudas no es mi ex marido ese!!! –había registrado el golpe….la atmósfera aquella se tornó algo densa, busqué salir de ello, no sabía, aún, cómo haría con lo que esta nueva cosa me planteaba, ni cómo saldría de allí sin agravar lo que se vislumbraba.

_Bueno, muy rico el café…gracias de verdad, podría ver la pared, te parece? –necesitaba que todo pasara rápido, encontrar un modo para salirme de todo eso._Dale, vení es en mi dormitorio! –rápidamente tomó nuevo entusiasmo.Al entrar en su habitación, me señaló la pared aquella, toda plena, toda blanca….y mientras yo lo consideraba me dijo:_Qué te parece Daniel???? –tirada en la cama ahora, viéndome desde allí, en una fuerte actitud muy sensual y sugerente, no me preguntaba por la pared sino por ella misma y esa situación, pensé enseguida._Es una buena pared….sólo pude decirle eso a modo de esquiva manera sutil._Fijate, si la ves desde aquí –señalándome la cama a su lado- notarás todas las posibilidades que tiene- era alguien que no se rendía nunca, que iba por todo rápidamente, como si sintiera que el tiempo era algo que no le sobraba._La veo bien así…… -a esta altura no me importaba pasar por idiota, sino mantenerme alejado, le había prometido a aquel hombre algo y entre mis códigos no figura nunca faltar a lo dicho.

_Bueno Daniel….que se yo…. –igual de rápido se le notó la incomodidad y la dureza frente a lo que interpretó como rechazo –decime si se puede hacer, que idea tenés y tus honorarios._Bien, dejame pensarlo si? A ver qué se me ocurre…. –de este modo pretendí salir de la situación, y del departamento._Bueno….por el costo no te preocupes ya hallaré la manera que nos pongamos de acuerdo… -dijo esto como quien tenía en mente otro tipo de “pago”. Allí comprendí algo más sobre esta mujer, una que vivía asumiendo siempre que hallaría beneficios materiales a partir de su hacer sensual._Bueno Daniel, algo más…? –como último intento de su parte, esa pregunta._No, ya está bien, lo he visto todo. –a esa altura estábamos ambos hablando en sentido figurado hacía rato.

Tomó las llaves y bajamos en ese ascensor, en silencio, ella estaba re cerca, se tomaba el cuello como acariciándose sutilmente.Al fin preguntó?_Vos tenés pareja no? disculpame la pregunta, vas a pensar que soy una invasiva jajajaaj… -se ve que no pudo resistir preguntarlo, dentro suyo

no comprendía algo que no siempre esperaba que le pase en esas situaciones._No, todo bien, no lo tomo mal ni nada –me apuré a contestarle._No, no tengo pareja ahora…..quisiera si una mujer para mi, no puedo hallarla aún.Con mi respuesta, algo en ella le dio más incomodidad aún, algo que ahora si sentía como rechazo personal, uno que no podía procesar.Al llegar a la puerta del edificio, como intento final de dejar abierto “algo”, me dio un beso muy, pero muy cerca de los labios y susurró:_Bueno Daniel, yo paso por tu taller, sino también podés venir a verme y hablamos aquí, te prometo más café, no se…..lo que te guste –dijo eso con una gran sonrisa….muy sugestiva, como cosa divertida pero certera._Ah, pero no te dije nunca mi nombre…..ni me lo preguntaste, soy Teresa! –ahí caí que nunca le había preguntado eso._Bueno Teresa, que la pases bien! –contesté enseguida.

Un mito Onírico sobre la creación

Dicen…..de un modo casi silenciado, así como a murmullos….a la pasada.

Hay que insistir verdaderamente mucho para que alguien allí, en Onírica, quiera tocar el tema.Como si en ello se cifrara el misterio de un secreto que no se quisiera revelar; como si se sintiera que eso mismo haría finalizar la “magia” de toda la comarca aquella.Dicen, que en el principio, todo era una espesa nube como de un vapor algo violáceo….cálido por demás, y tan apegadamente sonoro que nada más podía escucharse.

No habían formas aún, sus bosquecillos y praderas no existían, estaban como esperando el tiempo y las formas que muy dentro se estarían formando.No había vida alguna…como la conocemos.Nada! Sólo un enorme vapor que lo envolvía todo, como de una nube gigantesca sin principio ni fin….ni propósito.

Dicen, que un día (mejor una noche, no hay acuerdo entre los que me pudieron decir algo sobre ello)….una noche arribó allí un hombre….sólo un hombre.

Traía consigo un enorme anhelo, un deseo….un gigantesco amor; más bien ese amor, ese sueño, lo traía a él.En el otro extremo de ese “embrión” nuboso que era lo que luego sería Onírica, una mujer…..que como casual instancia del “destino” se escondía (de qué, de quién?) en ese sitio.

Él la halló, de alguna manera la encontró….apenas verla y fue amarla…..corporizaba ese sueño que lo traía desde tan lejos.Ella, que sabía esconder lo bien que se escondía, lo llenó de palabras todas “rotas”, todas “muertas”.Él no quiso verlo….luchó dentro suyo porque fuera.El final….inevitable!

Dicen que, cuando él quiso abrazarla….estrecharla hacia si, ella se evaporó como si no existiera.Y dicen también, aquellos que apenas se atreven a contarlo, que desde entonces él no ha dejado de soñarla…..

Y que así, con la fuerza descomunal de ese sueño, de ese anhelo (que no fue), todas las cosas se hicieron reales y corpóreas en Onírica!Algunos incluso, en el Lago de los Poetas…ese sector de Onírica tan bello….suelen afirmar que en alguna parte él está…aún.Los bosquecillos tan tupidos y llenos de aromas vegetales, las praderas multicolores de verde, los estanques con sus brillantes bichitos de luz, sus aves misteriosas y diligentes, sus secretos llenos de arte en permanente ejecución, sus deliciosas manzanitas, los seres que la habitan, el mismo castillo con el Maestro Chen dentro y los Samuráis aquellos; toda la Onírica que visité un día tomo su forma y propósito de aquel hombre y de su sueño….

Y luego, de algún modo, los sueños de todos aquellos que no alcanzaron a realizarlos aquí, en nuestro mundo y nuestra vida; aquellos sueños que fueron valientemente intentados, aquellos que fueron perseguidos con gran anhelo, los que pusieron en muy segundo plano los intereses materiales; esos que fueron concebidos sin bajezas ni mezquindades….todos esos anhelos, de todos

los hombres y mujeres…..le dieron y dan forma corporal a Onírica.

Alguien sugirió, más bien fue un murmullo dicho muy bajito…..como aquel que siente que no debe decirse nunca tal cosa y teme ser descubierto; alguien me sugirió (no lo dijo directamente pero comprendí su decir), que toda Onírica es la Comarca que “aquel” hombre le construyo a “ella”….con su anhelo, con su sueño, con su dolor, esperando que un día (ella) también pudiera soñar así….y al fin hallarla.El tono en que me fue confiada tal cosa….el dejo de pena implícita en el relato, me hizo comprender que aquello aún no sucedía.

(Entre las sombras,entre las penas,allí donde se escondedetrás de una sonrisalos últimos latidos evaporados.Cada color en la floresta,cada brillo en el estanque,cada corazón que aquí palpita,todo para tique ni lo sabes.Y en el sonido coral

de todas las mañanas,le fui poniendo nombre al día que regreses,con la fecha bien cerquita de cada amanecer,y el olvido de todos los ponientes.Escurrida de mi,sé que pudiste sentirloantes de hacerte hervor al desayuno,y que algo dentro tuyo te hace evocarlocada noche.Y la luna éstaa medio crecer,que no se atreve (aún)a mostrarse por completo;como sabiendo todos mis anhelos lejanos.Y un vals a cada paso,aquel vals,que te susurra el camino de regreso,llamándote a murmullos con el nombre que yo te di….ese mismo que tanto te gustaba.)

(Un vals que todos saben en Onírica)MI LUNA

(VALS)

La luna, mi luna se quejade su desamparo, de su soledad,

dice que brilla lejanaque luces que tieneiluminan igual….Yo sé que ese brillo es prestadolo sabe bien ella,el que brilla es el sol.

Se queja de cierta distanciade solas mañanasde eso no importar….No quiso el amor que le dabalo tiró bien lejosqué puede importar…..

La luna muy sola, muy fría,presume de brillos que sabe tener…Certeza del brillo muy míoque puse en su almay que no le importó!

La luna,qué sabe la luna…Mi espera de nochespara verla otra vez…Qué sabe de brillos que tengoque muren al díaal amanecer….

Más cerca del encuentro con “El”

De vuelta en el taller, aún sin poner en orden mis ideas, confuso al extremo más bien por aquel retrato que vi en la casa de Teresa; mi apuro por salir de allí; la certeza de haberla conocido y tenerla enfrente, y mi impotencia de decirle lo que un día le prometí a “aquel” hombre, en Onírica.Me vino a la mente, como cosa sin sentido frente a todo ello, un sueño de esa misma noche, con “ELLA”…..el amor que me negué que se fuera por la alcantarilla del basurero de mi vida, que fuera indignidades hacia mi nombre sin manchas.

Recordé algo al levantarme…era más bien una sensación, de esas que te quedan como el primer sorbo del café a la mañana,Con imágenes borrosas, pero con la certeza muy dentro de su visión y el encuentro.Me vino a la mente….y quise volver a apartarlo de mi, como quien hace un cotidiano ejercicio ya sabido de no sumirse en los dolores, de repararse.Por algún motivo desconocido volvía aquella imagen y aquella sensación a mi; uno que no podía (aún) comprender.

Se me prefiguró su nombre casi hasta los labios, que hicieron el (rebelde) intento de sublevarse.Al fin logré que tal intento no me llevara otra vez, como tantas veces….tan lejos….tan lejos.Mientras ponía el agua a calentar, para que el café fuera la excusa suave a tales olvidos, hilvané claramente todas las condiciones personales que Teresa, la mujer que creí no ver nunca, la de “aquel” a quien le prometí (al verla, si la veía un día) hablarle de él.No sé si a esa altura me pesaba más toda esa cosa así de manipuladora y falsa que le ví, o el juramento no cumplido por mi.Pero algo me incomodaba, creo que era más esto último.

Lo cierto es que ahora sabía más, mucho más….Ahora casi comprendía, por un simple episodio al pasar, las razones profundas de “aquel” que se había enamorado de esa mujer y su pena infinita!Ahora podía casi tocar sus dolores, sus decepciones….sus angustias.La impotencia esa que tan bien conozco, cuando alguien sólo responde con pura cosa

mezquina e indigna, frente a tanto amor ofrecido.“Te comprendo bien ahora”…pensé susurrando las palabras mientras venían a mi, como quien es una sonoridad instantánea frente a los pensamientos que llegan.Me serví el café….el frío se había colado, sin permiso, en todo el taller; al primer sorbo volvió todo aquello que me negaba a mi mismo cada día.La fría y sencilla manera del olvido de mi mismo que cada amanecer se hacía gran tarea.Porque olvidarme de mi, era poder olvidarla, pensaba….y haciéndolo la traía, muy a mi pesar….cada noche!Y no querer nada más….y dejar que se vaya por la nada cada persona frente a mi, alguien posible, alguien sólo sugerido o bien explícitamente en pos de mi.No querer nada más, pensé…..y entonces me di perfecta cuenta que yo hacía, de otro modo, lo que “aquel” hombre hacía con su vida, con esa tarea que me contó que tomó…por ya no esperar ni nada querer de la vida, por ser la misma muerte!

También yo hacía eso….con la taza de mi café clavada en los labios, buscando entibiarlos….así evocaba todo aquello y las sensaciones que me quedaron del encuentro con Teresa.También yo, aunque de otro modo….Llevando, cada día, a los tonos y las letras, al lienzo o la madera, ese mundo que tenía para ella y que su desprecio final hicieron su lugar en el desván aquel que llamaba “mi taller”.Si, era de ese modo al fin…teníamos eso en común….él se abandonaba a la más penosa de las tareas….yo, apenas si podía abrirme paso entre pinceles manchados….haciendo solo lo que ambos dijimos desear.“Cuánto te comprendo”, pensé……”nunca sabrás cuánto”, me repetí, ahora en voz alta!

La taza de café entibiaba mis manos, la tomaba como quien se aferra a un lejano vestigio de tibieza, de agradable recuerdo en medio de un mar furioso…apenas antes de morir.El humo subía desde el fondo mismo de la taza nublando los lentes de mis anteojos….como los recuerdos aquellos se nublaban con el paso del tiempo….para sólo dejar imágenes burlonas de todo aquello.

Tenía tarea que hacer, lo sentí como un refugio suave ante tanta cosa así sentida.Los días eran todos iguales, nunca tuve la facilidad para que, con toneladas de nada, de superficialidades y tanta cosa virtual hoy día….nunca tapé con risas y sonrisas mostradas como máscara patética…aquello que es verdad en mí.Como sea…..me dispuse al trabajo, y como quien se reusa (pero quién?) a dejarlo así sin más….en la bella música clásica que sonaba en mi radio “apareció” Tristesse….ese bello estudio para piano de Chopin….el que tan bien ejecutaba aquella niña en Onírica….la que aún muerta hacía tiempo, un anhelo, una esperanza frente a todo…la mantenía viva; la de ese niño que se llamaba como yo….su deseo y su amor la mantenía con vida….aún cuando había muerto hacía tanto…..

El día llegó…más bien la noche.

El fin de semana llegó, con el tiempo había aprendido a no sentir el cansancio, así…como cosa física.

Era más bien una necesidad íntima, algo dentro de mí no sabía de negaciones. No soy de salir en general, de buscar qué encontrar por allí….de “explorar” lo que hubiera.Pero aquella noche de sábado algo me impulsó, lo sentí muy raro en mi, pero tanto como irrefrenable en su energía.Me dí una gran ducha muy intensa….algo así como con la sensación que me sacaba de mi algo más que lo que jabón podía en mi cuerpo.Me abrigué un poco….fui por mi moto y salí sin saber muy bien dónde iría.Había un frío intenso, pero algo piadoso en su sentir, al menos eso me pareció.Tomé Corrientes hacia el lado del centro, hacía tanto que no iba por allí…..el lugar donde había transcurrido tanto de mi vida de adolescente, de joven, de mis amores y mis amigos….de tanta vida que le dio forma a mi alma de poeta.

No iba a cenar, aunque al llegar a Uruguay, era imparable el sabor de las pizzerías saliendo de aquellos sitios.Busqué, deliberadamente, tomar por la misma Uruguay y volver un poco por Sarmiento hacia el lado de Callao, no quise pasar por aquella

pizzería (Guerrín)…. no estaba José, mi amigo del alma ya fallecido, ni estaba “ella”….con quien fui, en medio de un final tormentoso y triste, la última vez que estuve allí.Retomé por Callao, y volví a doblar por Corrientes….Paré la moto en la vereda, quería ver librerías, ojear algunos libros que no compraré….hundirme en ese mundo que fue tan mío hace tanto.No había plan alguno, seguro que cuando el frío hiciera más y mejor su tarea tomaría un café en algún bar, alguno que pudiera encontrar aún…más al modo de antes, sin tanta cosa moderna y fría de esas que parecen todos elegir estos días.

Como en los tiempos que el anhelo por la literatura fantástica, la ficción….los cuentistas del realismo mágico, me “llamaban” a mi paso por las veredas de Corrientes, y era como un imán irresistible cada librería, para ojearlos…..para desearlos.Los tiempos aquellos que contaba las monedas para adquirirlos y devorarlos.Como en aquel tan lejano tiempo de adolescente, buscando los “absolutos” en cada autor, en cada letra…..

Volvía a mi ese mismo anhelo que me llevaba otra vez, como quien aprendió a andar en bicicleta y pasaron 30 años sin subirse a una, pero que puede hoy salir andando sin problema de hallarse con una, con todo eso a cuestas y con tantos años sin hacerlo….allí mi fiebre de siempre por la literatura se abría paso por entre el tiempo pasado y me llevaba una vez más.

El frío había empezado con su insistente llamado en mi piel, como en aquellos tiempos también ahora….sentí la necesidad de buscar un bar y tomar un buen café; la tibieza que de otro modo no se hallaba en un nombre hoy, con la misma ansiedad íntima y el mismo fugaz reparo.Me subí a la moto, fui por Corrientes hacia el lado de Talcahuano, estaba dentro mío (también) el recuerdo de Ouro Preto, el mejor café del Centro….con la pena profunda que hubiera cambiado tanto ahora, ya no era de esa rusticidad que evocaba la época de esplendor de la calle Corrientes, su bohemia interminable, su raída cualidad tanguera, los dominios seguros del aroma suave y profundo que te llevaban, sin aviso ni permisos, hasta lo más íntimo de esa

misma bohemia que era (y es) un sino para mi vida de pintor….y de poeta.

Paré la moto justo en la vereda, poco más y la tendría conmigo dentro.Mientras la amarraba notaba cómo había cambiado su fisonomía, la modernidad de lo que ahora eran sus mesitas elegantes, ya no estaba más la barra aquella, única manera de acercar el alma al sabor de su café.Lamenté eso por breves segundos, pero ya no hallaría nada como en aquellos tiempos de los 70 y 80….después de todo, algo en mi también habría cambiado, ambas cosas lamenté.

Llegué a la puerta, con cierta timidez inexplicable empujé así el blindex como pedía el cartel, y al hacerlo…..todas las personas allí, todo su elegante modo actual…la esquina completa allí dentro, se llenó de una neblina muy espesa, tanto que nada podía verse.Cerré la puerta detrás de mi, con la natural inquietud por tal cosa, pero el frío de la noche me empujaba hacia dentro de todos modos….me quedé allí unos segundos que me parecieron eternos, parado sin atinar a nada.

Como cuando estamos en el baño y la ducha caliente ha producido enorme niebla, y prendemos un extractor para quitarla, así…al cerrar la puerta detrás de mi, empezó a disiparse muy de a poco esa neblina intensa.

Algo maravilloso e inquietante había empezado a suceder, aparecía ante mis ojos el viejo bar de entonces, el Ouro Preto de aquellos tiempos ya lejanos, con su rusticidad, con su barrita y su aroma implacable…pero vacío; nadie allí de todas aquellas gentes que divisé cuando amarraba la moto, por cierto…enseguida miré afuera por la vidriera a ver si estaba aún mi moto…allí estaba; en una calle Corrientes dónde (también) el tránsito se había detenido, las personas en la calle estaban inmóviles….sólo la luz de las marquesinas y los semáforos mostraban algo de vida.La niebla se disipó más y más…..Di unos pocos pasos y lo vi!De espalda….sentado en la barra aquella, era inconfundible para mi.Su ropa algo raída y vieja (pero limpia) su sombrero de ala ancha y negra….apenas visibles sus manos, una con la botella de caña y la otra aferrada a la copita.

Se dio vuelta…..giró con suavidad el asiento de la barra y me miró de frente._Te esperaba……-con tono suave, sutil y cálido me dirigió esas palabras. Al ver mi perplejidad y mi asombro volvió a decirme…._Si…si…..te esperaba…..-y dejó colgando todas las letras aquellas en la muy sutil manera que hacía esas pocas palabras decir tanto._Buenas noches! –alcancé a decirle._Vení, sentate….acá tenés tu café….-y con una risa muy extensa comentó como para si mismo…_No hay manera con este muchacho….siempre café!!!!

Le di unos sorbos al café, más necesarios por todo aquello que por el frío que también traía.Tal vez adivinando mis pensamientos, mis angustias probables, mientras tomaba un traguito más de su caña, al vaciar de un trago el contenido de la copita…..me dijo:_Muchacho…..no te preocupes….estoy de vacaciones esta noche!!!!! –entonces su carcajada fue tan sonora que miré afuera a ver si alguien la oía.

_Si….si….-prosiguió- nadie morirá esta noche….me debían unos horas, sabés?….y me las tomé hoy, lo necesitaba.Ahora no me miraba, lo decía como para sí, tan común en él ese modo así de sutil y divertido._Y me dije –prosiguió- voy a ver si encuentro a Daniel, es hora ya que hablemos un rato!

Yo seguía tomando mi café, lo notaba bien, sin nada inquietante en su actitud y su tono….con esa cosa tan entrañable que, paradójicamente por su “oficio”, tenía…su modo campechano y cómplice a la vez, como si uno participara de antemano en sus decires y en sus contenidos._Y mirá vos….te encontré!!! –otra vez la enorme carcajada aquella….se estaba divirtiendo bien…no a mis expensas….me hacía sentirlo cercano, lo hacía deliberadamente divertido como quien adivina la posible incomodidad ajena y se empeña en que no lo sienta así. _Vos sabés Daniel….necesitaba que hablemos, me resultó amena y grata aquella charla que tuvimos, te acordás? –había puesto su mano en mi hombro mientras lo decía, me miraba ahora bien de frente, me costaba sostenerle la mirada.

Algo había en mi que me avergonzaba, sabía bien qué era.Le había hecho una promesa a este hombre, un juramento; no había sido capaz de cumplirlo y ahora lo tenía allí enfrente….me sentí nada digno de su amistad.

_Bueno….bueno….-giró de repente, como comprendiendo algo.Se sirvió otra vez un trago más de caña y me dijo:_Vamos muchacho, no debe ser tan grave….vos también estás necesitando un trago, no? –asentí con la cabeza….tomó un vasito de allí y me lo acercó llenándolo de caña dulce._Ahí tenés! Te hará mejor que el café ese que preferís…y sonrió muy suave mirándome a los ojos._Ahhhh, casi se me olvida…..Muchachos!!!! -exclamó como llamando a alguien no visible, alguien que estuviera en otro lugar del bar que no podía verse desde allí._A ver Cachito….Marcos –llamaba a los músicos aquellos que siempre lo acompañaban.Y desde dentro, de lo que era en otro tiempo la zona interna del salón aquel, empezaron a sonar los muy bellos acordes de “Almita Herida”….el

bandoneón de Cacho y el violín (como un filo dulce) de Marcos……Primero la música….luego ellos, ambos tocando…..lo sentí tan grato!_jajajaj no hay manera con estos muchachos –dijo como explicándome- son de lo mejor!!!!

*(Yo te amé un otoño,ya lejano….Con el fuego azúl de mi pasión.Y hoy traigo tu recuerdo de la mano,crepúsculo lontano,fantasma de mi corazón….)

Y se hizo en mí la necesidad de cantarlo, y él me acompañó con una sonrisa muy amplia, mientras los músicos hacían malabares para seguirnos.

(Ibas caminando hacia el misterio…Yo salí a tu encuentro y te alcancé.Triste, cruzabas por la vida….Y al ver tu almita heridate acompañé.)Todo aquello era como mágica tibieza de primavera; aquella música y la letra tocaba lo

más profundo de lo perdido en mi, de todos los dolores resumidos.Y allí a mi lado él, con su manera cómplice y cercana, como comprendiéndolo todo, a pesar de su “oficio”, sentado a mi lado….haciendo que los músicos tomaran mi alma y la elevaran lejos de tanta cosa desolada.

(Cuando tu amor,el que sentí por tientre mis brazos te vi….que agonizabas con mis besos…Cuánto duró,tu amistad y tu amor no lo sé,si fue toda una vida o quizáun minuto supremo tal vez….Tan sólo sé,que tuviste el valor de encontrarel instante oportuno de huircon mi sueño detrás…..!)

_Ya ves muchacho, no ha de ser tan grave…-y sonrió de ese modo que tan bien te hace cuando quien habla con uno se dispone de modo que todo aquello que pudiera ser tenso se evaporara en la actitud comprensiva que lo evitará.

_No sé tu nombre, nunca te lo pregunté….- le dije casi con vergüenza._Qué puede importar mi nombre muchacho –y su tono ahora era de cierta cosa sentenciada que ya no puede corregirse._Llamame Juan, asi me decían todos._Ok Juan, hay algo que si no se lo digo seguiré estando incómodo….- le alcance a decir con mucho esfuerzo._Vamos muchacho, no será para tanto, tomate otra copita dale –otra vez su manera lo hacía más fácil todo.Llenó mi copita de caña fresca y dulce, la sentí más dulce que nunca, y más necesaria._No pude hacerlo!!! –como quien hace un descomunal esfuerzo, alcancé a decirle mientras sentía como mis palabras se agrietaban más y más al decirlo.Miró hacia abajo, como si algo se hubiera caído en el piso, hace mucho ya, y uno recuerda de repente ese hecho y entonces echa una miradita para ver si por casualidad lo halla.

_Muchacho…eso es todo? –y entonces giró su cabeza y me miró muy de frente por debajo de ese sombrero de ala ancha y negra.

_Si, eso es todo! –sentí que, una vez más, él pondría paños muy fríos a aquello que para mi era gravísima falta.

Prosiguió, después de considerarme mucho con su mirada penetrante, como quien puede leer en tus ojos sin que digas palabra alguna._Vos sabés….aquella noche la recordás? –claro que la recordaba muy bien, en ese bar tan bello, en medio de la tormenta terrible…..la fantasmagórica y nubosa imagen de esa noche nunca me dejo del todo._Aquella noche… -prosiguió enseguida- vos sabés….la tormenta esa, los destellos de mi vida tan parecidos a ella, la cañita ésta tan rica –y su risa era ahora muy plena- los muchachos –señalando a los músicos con ademán descuidado- todo eso….Se detuvo un instante, como para considerarlo mejor._Bueno, que se yo….todo eso, me puso algo débil, muchacho, y tal vez te hice prometer cosas que no debía!

Volvió servirse otra vez en la copita sin dejar de hacerlo en la mía:

_Dale Daniel, esta noche vas a necesitar más que una…..jajajaj -y su risa llenó todo el salón._Muchacho, ella no vale nada! Se bien eso, no te preocupes tanto, fue un momento de debilidad que ya pasó…..-meneaba su cabeza al decirlo, como quien busca mucho dentro suyo para no decir esas cosas, pero la verdad íntima se abre paso sola, a pesar de uno._Muchachos!!!! –levantó el tono hacia los músicos - “Cristal”, por favor bien filoso Marcos!Y una vez más sus obedientes músicos aquellos, sin leer partitura alguna, ejecutaban en profunda y conmovedora cercanía, de un modo tan callejero y arrabalero que te parecía que estabas en Pompeya, de madrugada fría, en aquellos tiempos.

Lo miraba, lo sentía….y pensaba a la vez; es una partecita mía, es tan como yo soy…..y tal vez por eso mismo teníamos estas charlas, tal vez…tal vez._Vos te pensás que no podría verla yo si quisiera? –de pronto me dirigió esa pregunta como una estaca que se clavó muy dentro mío; allí también me sentí identificado.

_Que no podría yo decirle todo lo que, al fin, alguien debería decirle…crees que no lo hice en su momento? –giró su cabeza para ver en mi rostro un atisbo de respuesta, yo no podía decir palabra._Bueno, no te preocupes tanto muchacho…..ya está, mejor si nada le dijiste, a ver si se piensa todavía que me importa!

Y entonces fui yo quien leyó bien profundo en su gesto, en su desviar la mirada al decirlo, en su tomar su copita con el puño bien apretado, como quien aprieta los recuerdos tenaces para que no se escurran; y para que no se cuelen por sobre las palabras, como con secreta vergüenza de un amor todavía sobreviviente entre tantas indignidades….uno que se quisiera poder apartar de si mismo, pero que vuelve con sus irracionales argumentos, con su fuerza descomunal, con su irresistible vuelta una y otra vez; con los recuerdos aún muy vivos, con la impotencia que ahora, en sus manos apretadas, podía ver como se hacían evidentes, con su silencio aún mas!_Juan…..ella es muy bella! –no sé por qué dije eso, pero así me salió, como que le dirigía estas palabras de justificativo a su afectación sobre

ella. Como si esa belleza diera el argumento necesario para comprenderlo aún más, los códigos que entre hombres sabemos muy bien comprender del amigo, porque nos afectamos del mismo modo la mayoría de las veces._ Si muy bella Daniel…..para mi mal! –y se rescató a si mismo con una sonrisa ahora, al jugar consigo mismo.

A esa altura no sabía muy bien si decirle lo del retrato con su imagen que vi en la casa de Teresa. Sentí que eso lo “anclaría” aún más a una secreta esperanza lejana, una que abriría aún más la herida.Prefería callarlo, mezcla de consideración y cobardía, ya vería luego si era necesario, ya había entendido que esta noche sería algo larga._Cacho!!!! “Maquillaje”….- sus músicos llenaron todo el salón de la belleza de ese tema.

(Y donde quiera que estés, agitando tu desnudez (seguramente); con una sonrisa plena que desmienta, que pueda hacerlo, ante los ojos ajenos, tanta cosa así hecha…tanta cosa barrida debajo la alfombra….Donde dirijas tus pasos, esos que un día quise hacia mi siempre; en cada pretensión vacía,

llena de virtulidades como si fueran reales. Como si pudieran reemplazar lo destruido.Allí, dónde sea que sea, lejos de mi, irremediable….cuando en la noche bien profunda vendrá por vos aquello que no has podido matar, dentro tuyo, en un lugar que se resiste al estallido aquel…..desde muy dentro te hace girar la cabeza para mirarlo bien de frente….no importa cuánto lo niegues luego, ese instante, con mi nombre escrito en tu piel, esa que con cremas cada noche buscás des-ajar, en tu piel que tanto amé…..la huella de un amor que se hace presente una vez más, te dirá lo que yo ya no puedo!)

_Decime Juan- me animé a preguntarle al oírle abierto a ese tema, el de esa mujer que se nota bien que tanto amó- por qué entonces no vas a verla?Estaba dirigiendo su copita, llena otra vez, hacia su boca cuando le hice esa pregunta….y como quien siente un fuerte impacto en el recinto frenó su mano y la dejo congelada en el mismísimo aire….su mirada en alerta, hacia el frente no hacia mi, y se le notaba que algo en si mismo buscaba muy dentro la respuesta. Luego

de unos segundos de silencio en ese estado, segundos que me parecieron horas, contestó:_Porque el olvido es la peor de las venganzas!!!

Su voz, su tono bien profundo trajeron esas palabras desde dentro, desde un lugar mitad descubrimiento mitad honestidad.Esa sentencia cayó en la barra aquella, modulando su voz, sin dejar su mirada fija en la nada, trayendo consigo la síntesis penosa de años de un dolor que, en tanto tiempo, no habían podido desembarazarse del recuerdo tenaz.Sentí…lo sentí, esas palabras suyas….como el derrumbe completo de aquel bar, como si una carga de dinamita lo implosionara.Y, entre los escombros de una vida muy sentida y muy digna, no podía no darse una honestidad tan grande para quien había sido tan valiente en su capacidad de amar.Volví, cuando pude reponerme de semejante afirmación, a preguntarle:_Juan….entonces no la has olvidado…..

Se volvió hacia mí al escuchar mi afirmación, que era una trampita en mi modo de siempre, preguntar respondiendo, como para facilitarle

algo que tocaba a fondo su intimidad, pero que surgía como obvio ante su “confesión”._NO, no he podido hacerlo!- su respuesta confirmaba lo ya implícito en su respuesta….lo hizo mirándome bien fijo, como buscando dentro mío una indulgencia que no me correspondía, pero dentro de Juan…algo le decía que podía confesarme tales cosas, como un “cómplice” nada causal…tal vez porque supiera (él) que mi derrotero tanto al suyo se parecía.

_Entonces- volví sobre el asunto, sintiendo que no sólo él lo permitía, sino que lo necesitaba- aún la amás!!! No es venganza entonces, Juan!_Muchacho, muchacho, muchacho- mientras se volvía servir un trago más alzo la voz para pedirle a sus músicos- “Sur”, Cachito!_Daniel….si que es venganza, porque ella no lo sabe!!!

Y los acordes de “Sur” la profundidad del bandoneón, su bucólica y sentida condición de un arrabal perdido ya, el filo que Marquitos le daba a cada nota de su violín….todo me lo rebeló en un segundo.

Allí, entre esos sones misteriosos y poéticos del tango aquel, en la cercanía de este ser desconocido….su alma y su sentir se volvían inmensos.Sentí vergüenza de no merecer tales cosas.Allí estaba Juan, con su decisión certera y su tarea penosa, ya no lo tenía como aquel personaje que una noche tormentosa en Onírica me dio la sensación de un alma arrastrada en la impotencia y el abandono.

Ahora su magnificencia infinita a mi lado, sus breves respuestas afirmativas a mis preguntas, su honesta condición existencial, su confesa condición de pasional irremediable….todo eso me hizo verlo como era.Alguien con semejante capacidad de amar y con la valentía suficiente para hacerlo; sin reparos, sin temores, apostador de todo a un solo número….y al perder semejante apuesta, pagar e irse.Lo vi enorme, lo sentí hasta la última fibra de su ser.No era ya aquel que creí vencido y abandonado; que creí interpretar aquella noche lluviosa.No era la muerte siquiera…..sino la dignidad traída de los pelos y sentada allí, ofreciéndome

su caña dulce…sus músicos, sus palabras, todo de él, sentí vergüenza de mi….y sentí un gusto mayor aún por su encuentro.

Y mientras “Sur” hacía más hondo el hueco dentro nuestro….volví a preguntarle:_Juan, vos vas por todos los que mueren?- las palabras aquellas no pudieron disimular, al decirlas, lo resquebrajado de mi tono, no sabía si le afectaría hablarme de su penosa tarea actual._No muchacho, ese era el “pacto”, pero me rebelé- y soltó una enorme risotada- no me gustaban ciertas cosas y renuncié a ellas….no querían que las dejara pero eso hice….y no tuvieron más remedio que poner otro para esas cosas._Pero, cuáles, a qué te referís?_No más accidentes, no más con los chicos….en fin muchacho, lo que no viene de las personas mismas, lo que no es “su voluntad” para morirse, no lo tomé más…no me gusta ir por esas cosas, menos aún si son chiquitos.Cada vez tomaba más dimensión de misterio su decir y cada vez se me hacía más grande su manera.

_O sea que, no “intervenís” cuando la muerte llega por accidentes, si mueren niños….?_Así es muchacho, eso te dije- con algo de molestia contestó mi pregunta- el “arreglo” era que eso también fuera mi laburo…pero no pude y me les revelé jajajajaaj!- su modo era como de aquel que no teme deshacer un acuerdo si lo sintiera injusto o sin sentido, y para más me aclaró:_No es que sea hombre de falsear mis acuerdos no! Pero….estoy tratando con quienes hacen eso todo el tiempo, me estoy refiriendo a la “leyes” de la vida jajajaaj, y como ellas no saben perder, sintieron que yo hacía lo que ellos al dejarlo, insistieron un poco, amenazaron…pero ellos y yo sabemos que he perdido todo ya jajjjaj!

_Entonces, Juan, a quienes vas a “ver”?_Tomate otra copita muchacho- no era pregunta, mientras lo decía me llenaba la copita aquella….yo notaba que se sentía muy cómodo y que era de su gusto la charla._Muchachosssss- alzando la voz hacia sus músicos volvió a pedir…”Quejas de bandoneón”!

_Mirá muchacho, yo me ocupo centralmente de los que se matan a si mismo….cuando yo llego a ellos, no queda mucho que hacer.Ahora Juan se llevaba puesto todo el misterio de la humanidad en un modo de lo más campechano y simple, hablaba de esas cosas como si nada, los tenía en “categorías” bien definidas…..y sus palabras me estaban rebelando todos los misterios desconocidos para mi._Cómo???? Cómo que se matan a si mismos, los suicidas?- muy confundido atiné a preguntar más bien para saber mucho más, como excusa._Los suicidas decís??? Jajajaaj no, esos son más dignos al menos, a ellos voy con gusto!!!!Y prosiguió:_Los que se matan a si mismos…..hay muchas formas de matarse, Daniel….más de las que podrías imaginar, y eso que sé bien que lo que te sobra es imaginación muchacho jajajajj!!!

_Ayudame a entender Juan, a qué te referís?_Los ves allí, ahora están congelados no? Han salido hoy sábado, andan por allí, algo producidos, con sus vidas que parecen ir a alguna parte…sus días, sus noches, con sus anhelos a cuestas, con sus intentos (los más

dignos), con sus cobardías disfrazadas de intención valiente, la mayoría de ellos…..ya están muertos mucho antes que yo llegue!!!!!Al oír estas palabras suyas sentí que asistía a la más profunda de las revelaciones….todo aquello que había tratado de sintetizar en mi vida profesional y en mi vida dedicada al arte, todo allí en un compendio al que me tocaba asistir de manera desigual.

_Juan, podrías ser más claro para mi?_Muchacho, no lo tomes tan solemne, es sólo la naturaleza humana….nada por lo que el cosmos entero se mosquee siquiera jajajajaaj!Y prosiguió:_Se matan de muchas formas si……- y elevó la mirada para tomar fuerzas para decirlo más claramente._Viviendo lo que creen que es vivir. Destruyéndose en excesos que tratan de tapar lo que no alcanzan o no se atreven. Con cobardías a pura pretensión valiente jajajjaaj. Creyéndose grandes cosas y viviendo de pequeñeces. Pisoteando al de al lado mientras ejecutan el papel de víctimas. Mintiendo para quitar y lastimar, y de ese modo sentirse que compensan

las mentiras hacia si dichas. Siguiendo cuánta zanahoria se les pusiera por delante.Que se yo muchacho, todo eso…a veces todo junto, la más de las veces._Comprendo, pero por qué decís que ya están muertos cuando vos llegás, Juan?_Por todo eso…..”viven” hacen sus cosas….se desarrollan incluso, se ríen bien fuerte….maldicen lo injusto de todo lo que los afecta, su comodidad, sus pretensiones…..andan por allí y aquí, algunos incluso tienen “éxito” jajajaaj, lo que les parece gran éxito jajajaj…..Daniel, no sirven ni para amigos ni para enemigos, ya están muertos y enterrados hace rato!

Quedé en silencio un rato enorme…era mucho para procesar en ese instante, estaba lleno de verdad y de obviedades que bien conocía yo de tanto vivir, pero no lo había sintetizado de ese modo.Entonces, al ver mi silencio sobre la barra aquella, prosiguió:_Ya están muertos Daniel…..no tengo más que ir por ellos, es simple y en el fondo les hago un gran favor, por eso no me afecta….tanto!

Y, volviendo a sentir que mi silencio estaba afectado de tanta cosa por comprender aún, prosiguió:_Pero con los chicos no!!!! Ese es mi límite, ellos sí son sólo víctimas, y en los accidentes no; prefiero intervenir cuando el tiempo se agotó en valentía o en cobardía, pero no por accidente, así no se muere con “justicia”. Hizo una pausa que apagó con un trago completo de su copita…_Con los enfermos si tengo alguna cosa aún….no con los que se matan por excesos, sino por los otros….los que son “terminados” por algo que se desata sin más….ahí debo ir…pero ya veré el modo de dejarlo jajajajj- su risas le quitaban bien todo dramatismo al tema.

Entonces me animé a preguntarle:_Juan….ella está muerta también, entonces?Mi voz se quebró antes de terminar la última palabra, sabía que vendría como respuesta algo que me angustiaría, y no me equivoqué, más grave aún que lo que esperaba:_Cuál?????????? La tuya o la mía?????Me volví hacia él, ambos estábamos allí mirándonos bien de frente, comprendí que este hombre me estaba llevando al límite de todo,

me hacía ver que preguntando sobre Teresa, su mujer perdida, lo hacía con aquella que tenía esa significancia para mi.Quedé en silencio, no podía responderle, tenía un gran lazo en mi garganta.Entonces hizo lo de siempre, respondió por él y por mí._Andan por allí y por aquí…..se ríen de todo, se desvisten y se muestran…..presumen grandes cosas y son sus maquillajes el recurso final jajajajaaj….Se hizo un gran silencio entre nosotros, nos mirábamos de frente, bien a los ojos._Ambas están muertas!

LA CARTA NO ENVIADA(Cuando de ti….y de la magia que no viste; o mejor…que no quisiste ver…..Y en el mismísimo abismo, con los pies y con las manos metidas en el barro más denso, tan sólo por amarte, por no dejarte solita así, cayendo y cayendo más y más….sabiendo bien que te llevarías (en la caída) todos mis anhelos.

Y mientras intentaba (en vano) sostenerte….mientras todo lo construido en mi trataba que vieras muy dentro lo bueno que

sería, que podría ser……que hallaras (al fin) un hueco en la pendiente, que mi voz no dejaría de llamarte, que mis brazos de abrazarte, que mi deseo y valentía…..de nombrarte.Y todo allí así, sin más remedio….más y más profundo cada día; fingiéndolo todo, exhibiéndolo todo, penosamente, como te dije que sería.

Y ya no mirar aquello que dejaste ir por la alcantarilla; y ya no mirarte más….ya no hacerlo.Deshacerme de la cosecha esa sin venderla, no es para mi, ni querer que sea.Y otra vez, con tu destino elegido de moribundas pretensiones tan vacías….todas esas cosas perdidas para siempre; para siempre….para siempre, las mismas dos palabras que te dije un día y que cumplí hasta quedarme mal herido….para siempre.

Siento los pájaros allí afuera, no ignoran siquiera un poco sus destinos de poetas.Cantan porque desean hacerlo, vuelan porque ese es su destino, en cambio tu nombre breve tuvo todos los olvidos…..mientras “alguien”

más profundo en tu interior lo sabe bien….lo sabe.Y entonces yo seguí mi vuelo, ese que quería para ambos.No quise ni querré jamás revolcar mis alas en la charca que elegías…porque no quería (yo, ahora) que la música y los colores aquellos tuvieran, en su final, mi nombre inscripto allí como verdugo.

Y sobrevivirte…..Esas dos palabras jamás deseadas ver vinculadas; junta a tu nombre……tu nombre y muerte!Y saber que tu ir y venir no lo desmiente.Y no querer mirarlo…..Y ver en esa misma risa exhibida, a plena desnudez, el certificado final de la miseria.Y ya no hacerlo….ya no hacerlo!La penosa tarea, ahora tan digna como dolorosa, de levantar las raíces que un día deseé que fueran eternas, del sitio aquel que te di y que pisaste.

Me iré de allí también, como postrer adiós….en la última visita al lugar de la sepultura.

Dejando en tu tumba vacía dos florcitas de Cerezo, caídas en pleno apogeo, con su casi blanco, casi lila, muy púrpura….e irme enseguida para no verlas al fin perder su perfume y su color tan bello.

Y el silencio detrás de mi……y mi mirada que se levanta.Volviendo a “recordar” el ejercicio aquel de “cómo era que se volaba?”.Y volver a maravillarme; y volver a creerlo; y volver a anhelarlo…..Haciendo mi mejor esfuerzo para ya no recordarlo…..tu nombre que un día fue pasión y amor hasta el centro mismo de la galaxia…que (tal vez) tan lejos fue….que ya no supo regresar.

Saberte muerta……Cómo le explico ahora a aquello que llevo dentro…..que ya no estás?Lo veo allí, como a un niño pequeño, al que deben comunicarle la muerte de su perrito tan amado.Cómo se lo explico, siendo (como es) que ya lo sabe hace rato, con todas sus razones y nunca le alcanzaron….

Bien….no importa, no importa….Otra vez a mirarlo bien de frente, y andar con el único rumbo de hallar el lugar exacto dónde plantar los árboles, de nuevo.

Y al alejarme de allí….Al alejarme…..echarle la última mirada al lugar en que queda inscripto tu nombre ya extinto; como quien no ha alcanzado a despedirse del todo…..

Y ver, en esa última vez…..junto a tu tumba no querida, que en ella se queda también….el nombre mío que te dí…..que ame darte…..junto a tu último lugar, porque no ha querido marcharse!)

_Daniel…..Daniel…- Juan me llamaba, yo me había perdido dentro, muy dentro de mi.Todo lo que decía me había llevado muy profundo, estaba como tildado en aquellos pensamientos, la cañita (esa) también hacia su tarea.Mi mirada algo perdida en la escena aquella, Juan trataba de llamarme, más bien de rescatarme de tales océanos agitados…temía que algo dentro de mi ya no me dejara volver.

Volvió a insistir:_Daniel!!!- y ahora su tono fue más fuerte, entonces pude recobrarme de aquellos mundos perdidos, de levar anclas muy pesadas y regresar._Si…Juan, qué?- apenas pude balbucear con cierta vergüenza, como quien se siente descubierto en cosas muy íntimas que desea mantener en secreto.

_Te fuiste muchacho!!! Jajajaj- su risa fue piadosa, apenas esbozada con prolija condición para que no me hiciera mella._Te ha costado más que lo que eso valía!. Girando su cabeza de nuevo hacia la barra descargó estas palabras que tocaban más profundo aún, como comprendiéndolo todo.Como un torpedo bien dirigido que hace estragos en la quilla.

_Una cosa es el amor….eso esta en uno, muchacho, otra cosa lo que la persona en cuestión vale de verdad!- ahora era como si hablara como para si, como reflexionando en voz muy alta, y sentía que se refería a él (y a mi).

_Tomáte esto Daniel, lo estás necesitando hermano!- y volvió a servirme de su eterna botella de caña bien dulce._Podemos amar hasta la mismísima mierda loco!- ahora eran todas como sentencias, dichas hacia dentro y hacia mi._Juan…..hay cosas que yo no supe hacer…!-me salió solo eso, no sabía bien por qué razón lo había dicho._Cuáles muchacho?- preguntó con algo de interés._No supe….va, creo que no sé olvidar- mis palabras salían más allá de lo que estaba dispuesto a decir, algo en mi hablaba desde muy dentro._Vaya cosa muchacho…vaya cosa….-dejó colgando estas palabras mientras lo consideraba un poco, y meneando su cabeza de lado a lado se volvió hacia mi:_O no has querido hacerlo????

Me sentía, a esta altura de la charla, como frente a un equipo de rayos X, leía en mi interior, a partir de insignificantes frases o palabras…..mi vulnerabilidad estaba, a esa altura de la noche, entregada._Si que quise Juan….bien sé que quise!

_Comprendo…..-lo consideró un breve tiempo, tenía el tic de servirse una nueva compita cuando algo necesitaba de su consideración más amplia, y solía hacer, como hizo en ese mismo momento…pedirle a los músicos un nuevo tango._Cachito…..acá necesitamos “Rubí”, en re menor hermano!Los músicos tomaron sus instrumentos inmediatamente, era como si los primeros acordes abrieran mi pecho y pusieran mi corazón sobre la barra….latiendo allí, al compás de la melodía.

_Daniel…-volviéndose hacia mi empezó a decirme- es el motivo de tu arte; más bien el costo que eso que escribís y pintás tiene….si pudieras olvidar, así como así, no harías arte…al menos no del modo que lo hacés.

A veces era capechano, divertido y sencillo; otras era muy profundo y certero, con una sabiduría que lo llenaba todo._Qué es lo que te cuesta olvidar???- mirándome bien de frente, como con gran curiosidad, volvió a preguntarme._El amor…y los agravios.

_Que no olvides los agravios es buena cosa, eso hará que las dignidades tuyas queden a salvo finalmente.- Su tono era firme y aprobador._Que no olvides el amor…..-hizo una infinita pausa inquietante, lo estaba considerando mejor dentro suyo, mejor dicho estaba como eligiendo las palabras como quien no quiere ser hiriente._Eso muchacho…..te hace lo que sós, es el combustible de tu arte, además de tu tragedia! _El olvido es muy necesario Daniel, más en estos tiempos que las personas viven sólo para cuidar su propio culo, si me perdonás el término….que se yo, no me gusta hablar mal pero hay palabras que no puede sustituirse para decir tal cosa.Con esta frase empezó una especie de monólogo, mirando bien de frente al interior de la barra, como reflexionando en voz alta; mientras los acordes de los músicos aquellos lo llenaban todo, les había pedido (un instante antes) que no dejaran de tocar, como si lo necesitara para decir tales cosas….._Presumen grandes coooosas- subrayaba algunas palabras estirando las vocales- grandes magnificencias; presumen sensibilidades, bondades, solidaridades……una pose de poca

importancia hacia lo adquirido, hacia lo material alcanzado o por alcanzar…..La verdad muchacho es que no les importa otra cosa!!!Hizo una breve pausa para beber de un trago otra copita._Y por supuesto…..mostrar lo que no son; lo que ni siquiera quisieran ser; una enorme mascarada muy penosa, que vista bien de frente sólo llena de patetismo penoso y asco, a quien pueda verla._No hay manera muchacho….la pretensión de virtudes, imposibles para tales personas, es su elección…..su modo mediocre y maloliente…a la vez que su tragedia!_Viven como si fueran eternos, son capaces de manipular a sus propios hijos con tal de dejar a buen resguardo esa mascarada insignificante. Presumen poder amar, poder sentir grandes cosas…y, presumen (en ampulosa miserabilidad) ser dañados por los demás, para así justificarse.

No paraba de decir…..eran como cosas que tenía muy dentro clavadas; y eran las conclusiones de una vida muy llena de tanta cosa respirada bien de cerca.

_Todos erramos muchacho, todos….Pero una cosa es el error, otra muy diferente la elección de algo miserable.Hacía, a cada frase, esa pasusa que le permitía ordenar las palabras y elegirlas con precisión de francotirador.

_Nadie me va a decir a mi qué es lo único que nos llevamos…sé bien qué es tal cosa!!!!_Qué nos llevamos, Juan?- con timidez le pregunté de inmediato para no perderme la oportunidad esa._Cuando voy por ellos, ya te dije, la mayoría ya está muerto hace rato, solo es ir por un brevísimo trámite, por una cáscara vacía…..Volvió a su traguito….._Pero sabés……? Me quedo un poquito retirado, como haciendo tiempo a veces, no me da de ir así como así con esos tan escasos hoy.

Ahora sí que no entendía mucho que intentaba decirme, Juan estaba como ensimismado.Continuó enseguida, como intuyendo mi confusión:_Ellos sí que se llevan algo!!!!!....Siento incluso un poco de vergüenza de tomarlos; han sido capaces de no torcerse, de elegir la valentía para

no hacer sus vidas en charcas podridas, de no presumir lo que no son, de mirar de frente con la verdad; porque los otros, los miserables también miran de frente….son tan canallas que ni vergüenza tienen jajajaj

_Ahhhhh, casi me olvido muchacho, con Cachito y Marquitos te tenemos un linda sorpresita para el final….De pronto cortó su monólogo tan profundo para decir tal cosa, como acordándose de repente y, a sabiendas que su memoria ya no es lo que era, lo dijo ni bien le vino a la cabeza aquello.Yo solamente lo miraba, no sabía a qué podía referirse.Y continuó:_No se llevan nada Daniel……al contrario, la mentira de sus vida los sobrevive; lo falso de esos forzados argumentos un día se revelan, aún cuando ya no están para disculparse siquiera._A poco va a amanecer….- lo dijo como quien observa su reloj y se da cuenta de la hora ya avanzada._Esta noche no fue por vos muchacho, fue por mi!!!- ahora su tono era algo melancólico y doliente, enmascarado en una voz que pretendía

ser firme, sin lograrlo a medida que hablaba más y más._Te dije que teníamos un sorpresita muy linda con los muchachos, para vos?- sí, lo había dicho!

_Vamos a disfrutar esto mucho, si?- y comenzó a servir, para ambos, una buena copita más de caña dulce._A ver muchachos, lo que le preparamos a Daniel…..se nos está haciendo un poquito tarde.Y con sones de bandoneón…..y suave melodía de violín, Cacho y Marquitos, hicieron que mi piel se erizara por completo, que sintiera la emoción mas inmensa, junto con un dolor de despedida, el último dolor….tal vez.

Allí, en sus bellos tonos y acordes, en un agradable y suave arreglo de la melodía; ejecutaban “OLVÍDAME”; tema que compuse un día….cuando me sentí re feliz de haberla hallado; aunque su letra definitiva llevaba consigo el misterio ése que sólo el arte de muy dentro suele llevar; la intuición de la despedida.

Y entonces, para más sorpresa de mi parte, porque aquellos músicos maravillosos nunca habían dicho palabra, la voz de Cacho, ejecutando el bandoneón a la vez….hizo de aquella letra dolorosa y final, el motivo que mis ojos se llenaran de neblina.

Olvídame

(Olvídame…..Que al despertar, frente al espejo, no hallarás…en lo empañado de tu imagen de trasluzlas huellas de mi piel toda la noche….

Olvídame……Si al fin y al cabo tu rubor y tu labial,y esa sonrisa ya cansada de fingir,pueden engañarte una vez más…..

Olvídame……Que yo….dejé en tu cuarto la amargura y el rencor,y me llevé….las pocas cosas que supiste compartir,no las verás entre tus cosas nunca más,son ellas el vacío que sentís…..

Y así…..mitad angustia de saberte de humedad….al arreglarte la mirada intentarás,que no lo noten los extraños al andar,y convencerte de un olvido que no es tal…..

Olvídame…..que es tu vestido cada día un intentar,sentirte plena a la noche al regresar,con la luna rota escondida en tu cartera…para olvidar que tu noche esta desierta,desierta tu ilusión y tu morada…mis manos de jinete y lo que daban,ausentes de tu nombre y tu dolor….

Olvídame……Si al fin y al cabo tu rubor y tu labial,y esa sonrisa ya cansada de fingir,pueden engañarte una vez más…..Y así…..mitad angustia de saberte de humedad….al arreglarte la mirada intentarás,que no lo noten los extraños al andar,y convencerte de un olvido que no es tal…..

para olvidar que tu noche esta desierta,desierta tu ilusión y tu morada…

mis manos de jinete y lo que daban,ausentes de tu nombre y tu dolor….

Olvídame….Olvídame…….)

La voz, inmensamente entonada, aquel bandoneón que podía hacer hablar al mismo asfalto, el “filoso” violín de Marquitos……no se bien qué fue…no puedo saberlo.La emoción de recordar aquello, una vez más, con la letra aquella, de un tiempo no creíble ya sepultado, como tantas cosas esa noche.Sintiendo que, tal vez, los olvidos no sean tales….sino un esfuerzo estéril de la necesidad que tenemos de dejar el dolor atrás.El alma a flor de piel, como nunca….erizada la piel con cada acorde y cada palabra.Y, tal vez, confundir que aquella neblina en mis ojos eran los vestigios inevitables de todas las valentías que supe concebir en mi, al amar como sabía hacerlo; y no darme cuenta, por tal estado de completa sensibilidad, que a la par de serlo…así en mis ojos, el ambiente todo de aquel bar se había llenado otra vez de aquella niebla del inicio, no percibida por mi.Y…de ese modo emotivamente íntimo y completo, sentirme como perdido y lejano de

todo ese ambiente, como quien penetra tanto en si mismo en un instante que pierde toda conciencia del entorno.

No sólo mis ojos estaban llenos de niebla….todo aquel recinto se había llenado de ella.De algún modo, uno que no puedo precisar por más que trato de hacer memoria (ahora) de todo aquello; de algún modo la música y la voz de Cacho se iban adelgazando más y más, hasta tornarse inaudibles…..Con más neblinoso se hacia todo, se apagaban aquellos sonidos tan bellos…..Mis ojos se habían cerrado por completo, pero apenas un instante….y al abrirlos ver toda la escena aquella cambiada de repente.Ya nada de niebla, ningún vestigio de los músicos aquellos; sorprendido por el bullicio extremo de aquel salón, de gentes por allí y por aquí llenándolo todo….Miré enseguida a mi lado, dónde Juan estaba sentado un instante antes….la banqueta alta de la barra a mi lado estaba vacía.

El hombre que atendía la barra se acercó a mí y me preguntó:

_Se va a servir alo más?Yo no podía reaccionar aún….lo miré como quien ve un fantasma._No…no…-me quedé un instante tratando de ordenar mis ideas, el hombre aquel me miraba con extrañeza ante mi actitud confundida. _Qué le debo? Atiné a preguntarle mientras sacaba un billete de 100 para pagarle, tenía en mi que tal vez no sería suficiente por el tiempo allí y las muchas copas tomadas._Por favor, no tiene más chico? -enseguida al ver el billete me preguntó el mozo aquel._Cuánto es? –le pregunté extrañado._Son 35 $, señor, apenas tomó un cafecito…. –como cosa obvia dejó caer esas palabras.Saqué un billete de 50 y se lo dí:_Está bien, gracias –le dije enseguida para poder al fin salir del sitio aquel, como huyendo (pero de qué, de quién?).

Caminé hasta la puerta de salida, eché una última mirada intentando no ser descubierto en tal actitud. Todo allí transcurría como si nada.Elevé mi vista al gran reloj del bar, no había pasado más que pocos minutos desde mí llegada allí….como el tiempo mismo que lleva

tomar un café al paso, todo era cada vez más confuso.Salí, como pude, el frío del invierno me despertó del todo, con su manera tan firme, como suele hacer.Me acerqué a la moto….allí me esperaba como un “caballo” fiel a la espera de su jinete.

Las gentes por Corrientes se hacían muchedumbre…..un ir y venir febril, hacia ninguna parte (pensé).No podía simplemente tomar la moto e irme, sentía que ese lugar había sido el último sitio de aquel encuentro ya recurrente.Me senté en el cordón de la vereda aquella.Trataba de ordenar mis ideas pero más aún…de aferrarme a lo sucedido.

(Es fría la noche aquí…ah más fría sin vos….Estará tu alma y tu cuerpo junto a otro???Aquellas huellas que creí infinitas serán meras sombras???)

Aún sonaban en mi los acordes y la voz de Cacho….murmuraba ahora allí, sentado en el cordón de la avenida aquella, “olvídame…olvídame….”.

Sentí que cuando viera a Juan de nuevo, sería la última vez….y su tarea sería aún más penosa, después de todo nos habíamos hecho muy amigos!

(Porque quise, sin lograrlo, tallar en tu piel mi nombre de poeta….Porque creí que siquiera te conmoviera tal amor, y no se puede (con sólo las manos) tallar la piedra.)

No quería irme de allí, estaba como custodiando el sitio aquel…pero de quién, de qué?Y me quedé allí, no más….extensísimas horas.Sentado en el cordón de la vereda, mirando con asombro las personas bien ajenas.El cosmos estrellado como nunca parecía acompañarme, desde fuera, como compresivo amigo que nada puede decirnos que nos consuele, pero que igual se queda a nuestro lado.“El amor y la dignidad”….pensé…..como la combinación extremísima de un manera que había sido mi modo siempre.No existe la una sin la otra, pensé.No sabía bien por qué pero no podía dejar de repetirlo bajito, como a mi mismo…o al

cosmos aquel….como explicándole con cuatro palabras todo el resumen de mi vida.

(Y las mismas estrellas estas…las mismas!Sobre mi, sobre vos….Apenitas a poca distancia….Las mismas!!!!Y el brevísimo tránsito hacia encontrarnos, se hace de incontables milenios luz!)

Me quedé allí…..y cuando (tal vez) al fin puede levantarme e irme….me traje en el bolsillo, de contrabando, un pedacito de la luna aquella…

Aquella que “ella” guarda escondida en su cartera.Sólo que yo sí sé….que en pedazos, su destino de anhelo de pasión sin treguas…es una rosa blanca que se corta y muere antes, a pesar que se abra en silencio cada mañana, por unos pocos días!!!

FIN DE “Un café con la muerte”

EPÍLOGO

(El adiós a la novela)

Me despido aquí de la novela.Son variadas las causas por las que ya no podré ir más por estos senderos tan extensos como misteriosos de la ficción…del realismo mágico que tanto amo.Las condiciones en que he tenido que hacer este intento sensible han venido por mí, una vez más, y con mayores condiciones para negarme una tregua (siquiera).Y, aún, dentro de mí….las cosas se han puesto algo…cómo diría…inciertas.

La sensibilidad y la furia, del fuego que llevo dentro, cada vez toman más virulencia; como un incendio voraz que se hace más intenso cada minuto.No hay con qué apagarlo…ni intento hacerlo!La novela….ha sido el modo, el intento, de tratar (siquiera) de mitigarlo….Como suele pasar, los vientos de pasión que viven en mi avivan más y más las llamas aquellas!Algo dentro de mi me pide (a gritos) ya no más!!!! Dejarlo así….que no hay modo de tratar con esas brasas.

Si “Onírica, tierra de exilios” fue la mágica manera de bellas sensibilidades esperanzadas en los sueños incluso malogrados. Si “El otoño de las almas” el grito furioso de las justicias y dignidades por realizar.“Un café con la muerte” ha traído consigo, incluso a pesar de mi, el necesario portazo de verdades muy duras y penosas….pero verdades al fin.

“Adiós, me voy…de la novela”; me he repetido este último tiempo, aún mientras escribía este texto.Cada vez el tiempo que podía (apenitas) tener se ha hecho más breve con el transcurrir de los meses; como aquello que tiene un poder enorme y que sin embargo he podido desafiar hasta hoy, como es mi modo siempre, pero que ya viene por mi….por su “victoria”.El nombre de mis niñitos, Diego y Mariano, lleva todo mi intento sensible.Uno (diego), como espejo sereno de mi ser, de mi circular a pesar de todo por la vida, ganando batallas…ignorando los dolores…calladamente yendo por lo suyo….pero con mejor suerte.Otro (Mariano), un “evento” de sensibilidades al extremo de lo posible….un amor expuesto…

un intento constante…..con su piel recubierta de anhelos que no importan con qué choquen…..Ambos….muy valientes!!!!Nunca los manipulé contra las demás personas…no les hice pasar la buena gente por mala…..no toqué sus intimidades….los dejé libres….les mostré la vida real desde pequeños; no les quité ni personas ni derechos….no necesito ser lo que no soy con ellos….nunca sabrán (del todo) cuánto los amo cada día!!!Ellos están limpios! Los hijos de todos suelen estarlo, si no somos nosotros los que los revolcamos en la charca de lo injusto e ingrato, haciendo de sus vidas (aún sin saberlo, ellos) la misma cosa, aunque nunca lo descubran.

Estos días he sentido que no sólo me despedía de la novela, algunas cosas dentro de mí empujan ya muy fuerte para salirse fuera.Las estuve evitando lo mejor que pude, mi negación a hallar nuevas “tierras” para mi anhelo se chocan ya muy de frente con mi necesidad de poeta.

Lo que he visto, sin quererlo….sin hacer nada determinado, me ha hecho despertar aún más…

me permitió ver lo que, tal vez, era negación en mi….A veces lo más penoso se comprende mejor con sólo una breve imagen….tal vez “Juan” tendría mucha razón…..y yo lo hubiera estado negando.

No importa, no importa ya…..Veo las parejas en la calle, con su bello “abuso” de amor en una esquina….mientras paso a su lado pienso con todas las fuerzas que tengo:“NO SE HAGAN DAÑO…PASE LO QUE PASE, NO SE LASTIMEN!!!”Amo verlos así, me hace sentir que ese fugaz instante pudiera (al fin) hacerse magia sostenida para siempre!Llevamos dolores sellados muy dentro, ellos no saben perder, siempre encuentran el modo de hacerse ver, lastimando otras personas, mientras nos destruimos a la vez!Si sólo pudiéramos comprenderlo….el “enemigo” nunca estuvo fuera…..va socavando los cimientos de nuestra vida hasta que ya no queda nada que pueda sostenerse con firmeza, luce vistoso a veces, pero es sólo maquillaje, para los demás (y para uno!)

Me voy de la novela como quien ha perdido toda esperanza de hacerse comprender por sus contemporáneos!Sin embargo, mis banderas, cada una de ellas, lucen bien limpias y extensas ante el viento inmenso del campo de batalla….se exhiben así, orgullosas de quien las porta y las extiende.Mis vívidas banderas….Mis bravías…..que en la lucha (aún) desigual no han dejado de marchar a su destino.Nunca importó cuán perdida de antemano estuviera la batalla…..siempre hasta el fin, a pura vida!

Y es ese mismo ruido, de todos esos estandartes que llevo en mí, los que me han hecho de este modo….uno que morirá conmigo, de pie…como siempre!

Adiós a la novela….si hasta parece que no quiero despedirme, por eso vienen a mi esas palabras, más que como decisión libre, como orden íntima!Ninguna cosa es hoy más patética que el enorme esfuerzo invertido por las personas para parecer algo “bueno” y “valioso”.

Todas las justificaciones que circulan por allí son buenas para tal fin.La verdad general es que la hipocresía y la miseria han ganado la “batalla” social, con su tendal en todo “el campo”.

Mis letras y mis pinturas….no les he querido dar ese miserable destino.No quiero ser leído por semejante condición de seres que sólo esperan el eficiente modo de hacerse mejor(sólo) a si mismos.Están aquí (mis letras) para todos…pero son para muy pocos!!!He escrito para darlo gratis….pero la furia salvaje y su intento sensible le pone un buen filtro a todas esas gentes que, aun siendo que nada les costará en términos materiales, ni se asomarán a todos estos textos…..porque lo que aquí se dice los señala bien directo!

Para finalizar, y es bien literal el término…a los otros, los que han merecido este intento de mi parte; los que (incluso) no me leerán pero que son abarcados en estas líneas mías borroneadas con sangre; a todos ellos….que no se volvieron verdugos por el sólo hecho de haber sido víctimas; a los que eligieron no ser una

charquita muy podrida y bien maquillada; los que se deshacen al ver otro ser humano tirado en las calles, y no simplemente pasan de largo a su lado; a los pocos que pueden mirar de frente a la vida y el tiempo que les tocó; a los que van por las dignidades propias y ajenas mucho antes que descargar en los demás las propias miserias; a todos ellos….los únicos que me importan…..a ellos les he dado estas comarcas tan bellas y misteriosas…..ya que no podré abrazarlos a todos, al menos que en algún lugar (aún desconocido para la mayoría absoluta) quede bien registrado la valentía bravía y todas sus luchas por no ser lo que tiene un nombre y un destino tan penoso, como la muerte en vida que llevan impresas en sus frentes….aquellos para los que no elijo escribir ni una sola línea que los justifique!

Daniel Pereyra (agosto de 2014)