tercera parte: mujeres en la vida intelectual -...

48
Tercera parte: Mujeres en la vida intelectual © Hernando Maura Sor Jerónima de la Asunción La mujer en la sociedad española e hispanoamericana del siglo XVI Reading is nothing more than a substitute for thought of one’s own. It means putting the mind into leading strings. The multitude of books serves only to show how many false paths there are, and how widely astray a man may wander if he follows any of them. But he who is guided

Upload: duongdan

Post on 30-Sep-2018

214 views

Category:

Documents


0 download

TRANSCRIPT

Page 1: Tercera parte: Mujeres en la vida intelectual - …parnaseo.uv.es/Editorial/Maura/TerceraParte.pdf · La Biblia, por su parte, hace repetidas menciones de la mujer y sobre el comporta-

Tercera parte Mujeres en la vida intelectual

copy Hernando Maura Sor Jeroacutenima de la Asuncioacuten

La mujer en la sociedad espantildeola e hispanoamericana del siglo XVI

Reading is nothing more than a substitute for thought of onersquos own It means putting the mind into leading strings The multitude of books serves only to show how many false paths there are and how widely astray a man may wander if he follows any of them But he who is guided

132 JUAN FRANCISCO MAURA

by his genious he who thinks for himself who thinks spontaneously and exactly possesses the only compass by which he can steer aright A man should read only when his own thoughts stagnate at their source which happen often enough even with the best minds (Shopen-hauer The Art of Literature)

Si bien es cierto que en la sociedad espantildeola la mujer no ha ocupado tradicionalmente el privilegiado papel del hombre tambieacuten lo es que muchas familias salieron adelan-te gracias al coraje y dedicacioacuten de mujeres que sacrificaron sus existencias para sacar adelante a sus hijos Espantildea ha sufrido multitud de guerras a lo largo de su historia lo que ocasionoacute una gran mortandad masculina durante dichos conflictos A menudo han sido las viudas las que han tenido que ocupar el papel de sus maridos para no caer en la miseria La caballerosidad cualidad que tan unida va con la honra no ha hecho no obstante que hoy en Espantildea se respete y defienda a la mujer como se debiera En algu-nos casos tambieacuten es la mujer quien recuerda al hombre mdashiexcly de queacute maneramdash el pa-pel que eacuteste debe desempentildear como tal En Las Siete Partidas el rey Alfonso X El Sabio hace observar en la Ley II laquoComo el Rey debe amar et honrar et guardar a su mugerraquo Las razones que da el rey Sabio son tres la primera es que siendo la pareja una unidad cuanto maacutes se honre a la mujer maacutes honrado seraacute el marido La segunda es que vieacutendo-se la mujer honrada por su marido tendraacute laquomayor razoacuten de querer siempre su bien et su honraraquo y la tercera dice que siendo la mujer honrada los hijos que eacutesta tenga seraacuten tambieacuten maacutes honrados y maacutes nobles (129)

Estas palabras de Alfonso X sirven como ejemplo de comportamiento a la poblacioacuten general laquoa todos los de su tierraraquo laquoOnde el rey que desta guisa amare et honrare et guardare a su muger seraacute el amado et honrado et guardado de ella et daraacute buen exem-plo a todos los de su tierra maacutes para facer todas estas cosas bien et complidamente ha mester quel deacute atal compantildea de homes et de mugeres que teman a Dios et sepan guar-dar la honra deacutel et dellaraquo (128)

Las fuentes de las Partidas estaacuten basadas en los antiguos laquofuerosraquo en los escritos de San Agustiacuten San Gregorio y por supuesto en diferentes pasajes biacuteblicos Antonio Saacuten-chez Romeralo y Fernando Ibarra resaltan la importancia que tuvieron estas leyes en los nuevos territorios descubiertos en el Nuevo Mundo Africa y Asia llegando a ser el or-denamiento legal de mayor vigencia hasta fechas sorprendentemente recientes incluso hasta en territorios de los Estados Unidos laquopor ejemplo en Luisiana en una sentencia de 1924 algunas leyes sobre lsquocommunity propertyrsquo en Estados Unidos que estaban en vi-gor en algunos estados y hoy se han extendido a todos proceden de las Partidasraquo (38)

Si buscamos esta manera de pensar en el contexto de la conquista podemos en-contrar ejemplos muy significativos El franciscano Fray Juan de Torquemada primero entre los cronistas franciscanos que alcanzoacute la publicacioacuten de su obra principal hace mencioacuten no solamente de mujeres sino del deber casi sagrado de respetarlas y pro-tegerlas Los indios chichimecas llamados laquoHuachichilesraquo en cierta ocasioacuten atacaron un poblado espantildeol matando a toda la gente que en eacutel estaba y llevaacutendose ademaacutes a tres mujeres espantildeolas Los espantildeoles al poco tiempo encontraron el cadaacutever de una de ellas laquocuajado de flechasraquo La enorme indignacioacuten y rabia no por el ataque al cam-pamento sino por la muerte de esta indefensa mujer queda reflejado de la siguiente manera por el cronista franciscano

133ESPANtildeOLAS DE ULTRAMAR EN LA HISTORIA Y EN LA LITERATURA

que por ser vieja (que dicen pasaba de setenta antildeos) debieron de matarla que como baacuterbaros no atendieron a que era mujer y que por serlo mereciacutea estimacioacuten y respeto que son en lo natural por quien vivimos y somos que nos criacutean y dan leche cuando en los tiernos y primeros antildeos de nuestra vida no tenemos saber para velernos ni as-tucia ni mantildea para alimentarnos pero como gente que careciacutea de este discurso y razoacuten la mataron y dejaron en aquellos montes tan cua-jada de flechas como erizo de espinas Sintieacuteronlo mucho los nuestros y enterraacutendola por ser cristiana pasaron adelante que me parece que para ir con mucha prisa y mayor aacutenimo de alcanzar los enemigos llevaban por blanco la coacutelera y rabia de haber visto semejante espec-taacuteculo siendo cosa vil y apocada poner manos en mujer sino es de-masiadamente culpada y que cada cual propondriacutea en su corazoacuten de vengar la injuria como injusta y hecha a mujer flaca y sin resistencia (640-41 lib 5 cap 23)

El mismo Juan de Torquemada en otro de sus comentarios sobre ciertas disputas intestinas entre pueblos mejicanos dice laquoen especial las mujeres cuya lengua es maacutes feroz y cruel cuando la pasioacuten y la ira la gobierna y rigeraquo (177 lib cap 58) Lo que demuestra en cierta manera que la visioacuten general de la mujer no se limita a la de un ser indefenso por naturaleza sino diferente y digno de respeto no soacutelo por su delicadeza sino por su ferocidad

La tradicioacuten catoacutelica lleva a la identificacioacuten de la madre con la Virgen Mariacutea y el nintildeo Jesuacutes Esta identificacioacuten mariana ha formado parte del sentimiento de los espantildeoles desde su maacutes tierna juventud pasoacute a la Ameacuterica hispana y alliacute germinoacute de tal manera que hoy en diacutea se puede decir que el culto a la Virgen en Hispanoameacuterica supera en muchos casos a cualquier otra forma de identificacioacuten a nivel poliacutetico religioso o inclu-so deportivo

Es necesario ver cuales son las raiacuteces maacutes profundas del trato y concepto que se ha te-nido de la mujer en Espantildea asiacute como la incidencia de ciertas obras clave para entender esta determinada forma de ser y de pensar Sin pretender hacer un estudio socioloacutegico ni antropoloacutegico del tratamiento que los pueblos agriacutecolas dieron a los miembros de sus sociedades vale la pena tener en cuenta que hasta hace muy poco en el caso de Espantildea la agricultura junto con la religioacuten han sido el eje sobre el que han girado la mayor parte de las manifestaciones sociales muacutesica danza ceremoniales literatura supersticiones etc Espantildea paiacutes tradicionalmente agriacutecola y marinero con una poblacioacuten urbana rela-tivamente pequentildea especialmente en Castilla basoacute sus modelos principalmente en las ensentildeanzas grecolatinas y en la Biblia Para ser maacutes exactos durante la Edad Media el pensamiento escolaacutestico reinante supo sincretizar magistralmente la manera de pensar de Aristoacuteteles con las laquoSagradas Escriturasraquo Este laquosincretismoraquo seraacute igualmente utiliza-do maacutes tarde para adaptar el pensamiento cristiano con las religiones amerindias Aris-toacuteteles y la Biblia seraacuten pues dos referencias fundamentales a la hora de interpretar la idiosincrasia femenina Los principales intelectuales y teoacutelogos de la eacutepoca Sahaguacuten Las Casas Sepuacutelveda Duraacuten Montesinos etc mencionaraacuten a cada momento al laquofiloacute-soforaquo y su palabra seraacute siempre tenida en cuenta La iglesia catoacutelica seraacute por lo tanto el vehiacuteculo utilizado para llevar a cabo tal adoctrinamiento en las tierras descubiertas de

134 JUAN FRANCISCO MAURA

la misma forma que se habiacutea venido haciendo secularmente en tierras peninsularesAristoacuteteles en su Poliacutetica obra traducida al latiacuten en el siglo XIII por Santo Tomaacutes de

Aquino hace mencioacuten de la mujer junto con los esclavos y de la idea que de eacutestas te-niacutean los laquono griegosraquo

1252a34 Nature then has distinguished between female and slave she recognizes different functions and lavishly provides different tools not an all purpose tool like the Delphic knife for every instrument will be made best if it serves not many purposes but one But non-Greeks as-sign to female and slave exactly the same status (57 lib1 cap 2)

La Biblia por su parte hace repetidas menciones de la mujer y sobre el comporta-miento que eacutesta debe seguir en la sociedad de sus obligaciones y derechos para con su marido y demaacutes menesteres de tipo socioloacutegico que tienen como base comuacuten la familia en su calidad de centro de la sociedad judeo-cristiana El tono general sobre la mujer variacutea seguacuten los diferentes libros biacuteblicos Como norma se suele presentar un tono de subordinacioacuten al marido y en algunos casos de absoluto desprecio principalmente en el Antiguo Testamento Sirva de ejemplo este pasaje de Ester laquoTuacute lo sabes todo y sa-bes por lo tanto coacutemo aborrezco la gloria de los inicuos y detesto el lecho de los incir-cuncisos y de todos los extrantildeos Tuacute conoces que soacutelo por necesidad estoy donde estoy que detesto las sentildeales de mi gloria que llevo sobre la cabeza en los diacuteas de mi puacuteblica presentacioacuten que las abomino como pantildeo de menstruacioacutenraquo (Ester 14 15-17)

En el laquoDeuteronomioraquo aparece otro singular ejemplo del papel de la mujer en situa-ciones tan comunes como una pelea entre dos hombres Si bien en este caso la mujer en cuestioacuten es capaz de coger de los genitales al enemigo de su marido durante la con-tienda el castigo que se solicita para la mujer es desproporcionado e inhumano laquoiexclSi mientras rintildeen dos hombres uno con otro la mujer del uno interviniendo para librar a su marido de las manos del que le golpea agaacuterrase a eacuteste por las partes vergonzosas le cortaraacutes las manos sin piedadraquo (Deuteronomio 25 11-13)

En los proverbios se cita un ejemplo maacutes ilustrativo auacuten de la capacidad de la mujer laquolascivaraquo de atraerse con todo tipo de insinuaciones amorosas la atencioacuten de un laquopobreraquo marido ingenuo e indefenso ante tan manifiestas provocaciones Resulta interesante observar sobre todo coacutemo se presenta a la mujer a modo de una serpiente que encanta con sus provocaciones y su astucia a una viacutectima indefensa laquosimple y falto de juicioraquo

Era el atardecer cuando yaobscureciacutea al hacerse de nocheen la tinieblaY he aquiacute que le sale al en-cuentro una mujer con ataviacuteo deramera y astuto corazoacutenEra parlanchina y procaz ysus pies no sabiacutean estarse en casaahora en la calle ahora en la plaza acechando por todas las esquinasAgarrole y le besoacute y le dijo

135ESPANtildeOLAS DE ULTRAMAR EN LA HISTORIA Y EN LA LITERATURA

con toda desverguumlenzaTeniacutea que ofrecer un sacri-ficio y hoy he cumplido ya mis votosPor eso te he salido al encuentro iba en busca de ti y aho-ra te halloHe ataviado el lecho con ta-pices con telas de hilo recamadode EgiptoHe perfumado mi caacutemaracon mirra aacuteloe y cinaacutemonoVen embriageacutemonos deamores hasta la mantildeana harteacute- monos de cariciasPues mi marido no estaacute encasa ha salido para un largoviajeSe ha llevado la bolsa y no volveraacute hasta el plenilunioCon la suavidad de sus pala-bras le rindioacute y con sus halagos le sedujoY se fue tras ella entonteci-do como buey que se lleva almatadero como ciervo cogido enel lazoHasta que una flecha le atra-viesa el hiacutegado o como paacutejaro que se precipita en la red sin saber que le va en ello la vida (Proverbios 7 9-24)

El laquopobre paacutejaroraquo cayoacute en la red hipnotizado por la serpiente Desde el laquoGeacutenesisraquo hasta laquoMalaquiacuteasraquo esto es desde el principio al fin del Antiguo Testamento se puede apreciar en menor o mayor grado la misoginia cararacteriacutestica de una sociedad pa-triarcal Seriacutea prolijo citar todos aquellos pasajes donde esto se confirma siendo tal vez los siguientes algunos de los maacutes representativos laquoEl varoacuten no debe cubrir la cabeza porque es imagen y gloria de Dios mas la mujer es gloria del varoacuten pues no procede el varoacuten de la mujer sino la mujer del varoacuten ni fue creado el varoacuten para la mujer sino la mujer para el varoacutenraquo (Corintios 11 7-10) El proacuteximo fragmento hace referencia a la laquomujer disolutaraquo Para que te guarden de la mala mujer de los alagos de la mujer ajena No codicies su hermosura en tu corazoacuten no te dejes seducir por sus miradas Porque si la prostituta busca un pedazo de pan la casada va a la caza de una vida preciosa iquestPuede llevar uno fuego en su regazo sin quemarse los vestidos (Proverbios 6 24-28)

136 JUAN FRANCISCO MAURA

No es difiacutecil imaginar la repercusioacuten de esta argumentacioacuten si se hace de ella una inter-pretacioacuten literal sobre todo ante un pueblo de mayoriacutea analfabeta o poco instruida

Claro estaacute que seriacutea absurdo querer hacer un anaacutelisis literal de las palabras de las laquoSa-gradas Escriturasraquo Sin embargo eacutestas han influido e influyen en la sociedad occidental a un nivel maacutes elevado de lo que comuacutenmente se piensa a veces de manera incons-ciente De cualquier manera sin entrar en una comparacioacuten teoloacutegica entre el Yaveacute del Antiguo Testamento y Jesucristo en el Nuevo Testamento la diferencia que se hace del elemento femenino entre estos dos libros es laquonotableraquo Dice Yaveacute a Sauacutel laquoNo perdones mata a hombres mujeres y nintildeos aun los de pecho bueyes y ovejas camellos y asnosraquo Forma de pensar eacutesta que no concuerda con el laquoamor al proacutejimoraquo del Nuevo Testamen-to donde la venganza y el odio pasan a ser amor y resignacioacuten

En la Edad Media espantildeola existieron algunas leyes que teniendo como objeto a la mujer dejan entrever el derecho y las limitaciones con que eacutestas contaban en caso de abuso por parte de los hombres Un ejemplo de estos derechos o laquofuerosraquo podiacutean ser muy bien los de Jaca otorgados en el antildeo de 1077 por el rey Sancho Ramiacuterez Estos fueros en opinioacuten de Antonio Ubieto Arteta laquose extendieron a muchas poblaciones de Espantildearaquo Veacuteanse las siguientes claacuteusulas laquoK) Si alguien faltase con mujer con el consen-timiento de ella no siendo casada no pagariacutea multa pero si usase violencia deberiacutea tomarla por esposa o proporcionarle marido L) La mujer ultrajada deberaacute pedir justicia en los dos primeros diacuteas inmediatos a su deshonra presentando testigos Si pasan los tres primeros diacuteas sin reclamar ya no tendraacute derecho (Ubieto 135-36)

Observar el desarrollo que fue teniendo el papel de la mujer dentro de la sociedad especialmente de la espantildeola resulta sin duda interesante desde un punto de vista so-cioloacutegico Gracias a ello podremos comprender mucho mejor el posterior desarrollo de su participacioacuten en los acontecimientos de la eacutepoca que las tocoacute vivir y su posterior proyeccioacuten en el Nuevo Mundo siempre teniendo en cuenta el margen maacutes o menos estrecho que la Iglesia Catoacutelica y la mentalidad de la eacutepoca impusieron en mayor o menor grado a lo largo de diferentes periacuteodos Es por eso por lo que debemos indagar maacutes profundamente en todo lo relacionado con la actuacioacuten de la mujer en tierras de ultramar y sobre todo valorar sus acciones no como hechos marginales y esporaacutedicos sino como la base y los cimientos de una sociedad que todaviacutea sigue viva Son las voces de estas mujeres aquellas que se han podido rescatar el mejor testimonio Fueron las madres de los espantildeoles del siglo XVI dice Fernaacutendez Duro las que hicieron posible que en tan corto nuacutemero de antildeos se hiciese un derroche tan formidable de energiacutea en todos los mares y continentes de nuestro planeta

iexclQueacute grandeza queacute arrojo el de Espantildea en el siglo XVI Jamaacutes vio el Mundo energiacutea actividad y fortuna semejantes Para los espantildeoles no habiacutea obstaacuteculos en los riacuteos en las montantildeas ni en los desiertos Jun-taacutebanse unos cuantos creaban escuadras conquistaban imperios y fundando ciudades discurriacutean el modo de unir los mares y los climas Diriacutease que eran de procedencia de gigantes o de semidioses Eraneran hijos de tales madres (Duro 26)

Garcilaso de la Vega El Inca (1536-1616) cronista peruano hijo de un capitaacuten espantildeol y de una princesa inca tambieacuten se hace eco en su obra Historia general del Peruacute (segunda parte de sus Comentarios Reales) de la opinioacuten de algunas sentildeoritas que pasaron al Nuevo

137ESPANtildeOLAS DE ULTRAMAR EN LA HISTORIA Y EN LA LITERATURA

Mundo con la idea de encontrar al hombre de sus suentildeos en este caso al conquistador llevaacutendose una gran sorpresa al comprobar coacutemo las heridas las inclemencias del tiem-po y las enfermedades habiacutean dejado sus huellas en los rostros de estos hombres que no eran como se los imaginaban Este fue el comentario de una de las doncellas casade-ras que llevoacute don Pedro de Alvarado a Guatemala

iquestDicen que nos hemos de casar con estos conquistadores dixo una dixo otra iquestcon estos viejos podridos nos habiacuteamos de casar caacutesese quien quisiere que yo por cierto no pienso casar con ninguno dellos dolos al diablo parece que escaparon del infierno seguacuten estaacuten de estro-peados Unos cojos otros mancos otros sin orejas otros con un ojo otros con media cara y el mejor librado la tiene una dos y tres vecesraquo Dijo la primera laquoNo hemos de casar con ellos por su gentileza sino por heredar los indios que tienen que seguacuten estaacuten de viejos y cansados se han de morir presto y entonces podremos escoger el mozo que qui-sieacuteremos en lugar del viejo como suelen trocar una caldera vieja y rota por otra sana y nueva (Garcilaso vol 2 lib 2 cap 1 80)

Al escuchar estas palabras un caballero que se encontraba al otro lado de la cortina donde estaban hablando no pudieacutendolo sufrir maacutes las afrentoacute pasando luego a decir-les a los caballeros los laquobuenos deseosraquo de las damas Se marchoacute a su casa llamoacute a un cura y se casoacute con una india con la que ya teniacutea dos hijos a los que legitimoacute para que no pasasen a ser esclavos o criados de ninguna de esas sentildeoras (Garcilaso vol 2 lib 2 cap 1 81)

Muchas de estas primeras mujeres pasaron a ser viudas varias veces a causa precisa-mente de la muerte del marido en las diferentes campantildeas de los primeros antildeos

Fueron las descendientes de las mujeres que vinieron con los conquistadores las que de una manera definitiva asentaron las raiacuteces de una nueva sociedad que llegariacutea al mismo esplendor y refinamiento que la de la metroacutepoli El trasplante ya estaba realiza-do La violencia del laquoencuentroraquo de los primeros antildeos habiacutea dado como fruto una nueva sociedad que habiacutea heredado las bases de la cultura espantildeola y que teniacutea ademaacutes todo el encanto y riqueza de las variadiacutesimas culturas precolombinas

La primera generacioacuten corresponde ya a la mujer criolla hija de pobla-dora aquella que educoacute a los hijos propios y a los ajenos suavizando las costumbres baacuterbaras de la eacutepoca belicista Lo cierto es que a pesar de todas las vicisitudes la mujer hizo posible la creacioacuten del hogar en el que se fraguoacute la transculturacioacuten la sociedad gracias a su presencia fue perdiendo vulgaridad hasta alcanzar un notorio refinamiento Aun-que la paz tardoacute en llegar las treguas favorecieron el asiento en villas y ciudades En ellas florecioacute el romancero y la copla medieval junto a la arquitectura goacutetica el balcoacuten canario y el patio andaluz (Borges 436)

Ya fuese en la ciudad de Meacutexico o en la de Lima la mujer criolla gustaba de todas aquellas sofisticaciones que podiacutean disfrutar las mujeres de Sevilla o de la corte To-das teniacutean ademaacutes criados A mediados del siglo XVI empezaraacuten las navegaciones en-tre Meacutejico y las Filipinas lo que contribuiraacute a enriquecer los atuendos de las mujeres criollas asiacute como espantildeolas con artiacuteculos tan exoacuteticos en su diacutea pero tan castizos hoy

138 JUAN FRANCISCO MAURA

como el mantoacuten de Manila o el abanico Fray Reginal de Lizaacuterraga dice sobre las mu-jeres del Peruacute

La criolla es ademaacutes mujer que gusta de la ostentacioacuten y del lujo vi-cios muy femeninos que en parte la compensaban de pasadas o futu-ras calamidades En el Peruacute el vestuario se hizo tan ostentoso laquoque casi no se sabe coacutemo lo pueden sufrir los maridosraquo La soberbia de ellas es demasiada y no sabemos en lo que ha de parar no creo que hay en lo descubierto del mundo ciudad en su tanto ni cuatro veces mayor que a tanta soberbia en este particular como esta nuestra ciudad llegueCon justo tiacutetulo se podriacutea moderar por los virreyes esta soberbia Pe-ro no seacute por queacute no se modera y siacute seacute por queacute ni los maridos tienen aacutenimo para moderarlo ni los gobernadores tampoco (Lizaacuterraga 38 lib 1 cap 51)

La mujer criolla participa en todos los aconteceres de su sociedad Estaacute presente en todos los acontecimientos sociales y con frecuencia econoacutemicos sin dejar por ello de controlar la vida del hogar Al igual que en Espantildea ellas se encargaraacuten de casar a sus hijas e hijos unos destinados a mantener la tradicioacuten familiar y enriquecerla otros a engrosar las filas de la iglesia

Mujeres en la vida intelectual espantildeola durante los siglos XVI y XVII131

Great genuine and extraordinary work can be done only in so far as its author disregard the method the thoughts the opinions of his contemporaries and quietly works on in spite of their criticism on his side despising what they praise No one becomes great without arrogance of this sort (Shopenhauer The Art of Literature)

De igual manera que se ha querido excluir a la mujer de las primeras paacuteginas del encuentro con el Nuevo Mundo otro tanto ha ocurrido con la labor intelectual de tan insignes mujeres Muchas pese a lo remoto de sus asentamientos lograron dar a luz los maacutes valiosos frutos de la poesiacutea liacuterica de su tiempo132 Un gran nuacutemero de estas mujeres dada la estratificacioacuten social de su eacutepoca desarrolloacute su labor en conventos Otras sin embargo hicieron lo mismo compaginando sus vidas matrimoniales con las tareas culturales La vida monacal daba ventaja en cierta forma a la hora de conseguir la independencia deseada para dedicarse por completo al mundo de las letras sin que un

131 Veacutease mi artiacuteculo laquoCara y cruz de la mujer hispana imaacutegenes del siglo XVIraquo132 Veacutease el ejemplo de Mariacutea de Alvarado la Amarilis de Lope de Vega que escribioacute su obra en los maacutes

apartados rincones de los Andes peruanos Veacutease Meneacutendez y Pelayo Marcelino Historia de la Poesiacutea Hispano-Americana 84

139ESPANtildeOLAS DE ULTRAMAR EN LA HISTORIA Y EN LA LITERATURA

marido o unos hijos se interpusiesen en el tiempo concentracioacuten y dedicacioacuten que una actividad artiacutestica requiere Pese a todo no siempre fue asiacute El maacutes conocido ejemplo lo tendriacuteamos en Sor Juana Ineacutes de la Cruz la cual tuvo que sufrir problemas con algunos altos cargos eclesiaacutesticos asiacute como envidias de propios y extrantildeos por ser entre otras cosas superior en inteligencia y cultura a la mayor parte de sus contemporaacuteneos

Muchos conventos estaban bien provistos de libros a menudo donados por aquellas familias que teniacutean alguacuten miembro dentro del convento o simplemente por simpati-zantes de las diferentes oacuterdenes religiosas En la paz del claustro algunas de estas mu-jeres llegaron a adquirir un formidable desarrollo intelectual Pero a pesar de la calidad del material que existe sobre tan insignes mujeres se las ha preferido mantener en la oscuridad Como deciacutea con ironiacutea el pensador espantildeol Benito Feijoacuteo (1676-1764) sobre las disputas entre hombres y mujeres laquoLo cierto es que ni ellas ni nosotros podemos en este pleito ser jueces porque somos partes y asiacute se habiacutea de fiar la sentencia a los aacutengeles que como no tienen sexo son indiferentesraquo (46)

El escritor argentino Vicente G Quesada ya se quejaba a principios del presente si-glo de la pobriacutesima informacioacuten que ofreciacutea la enciclopedia francesa Larousse sobre la vida colonial en Meacutexico cuando refirieacutendose a eacutesta deciacutea lo siguiente laquoLos uacutenicos libros que se conociacutean eran el almanaque el catecismo del P Ripalda el Antildeo cristiano la vida de los santos y otros de ese geacuteneroraquo (Quesada 125) El mismo autor refutando lo anterior escribe

Por uacuteltimo recordareacute la notabiliacutesima publicacioacuten moderna La Bibliogra-fiacutea mejicana del siglo XVI eruditiacutesima y que constituye el maacutes concluyen-te testimonio para desautorizar la ligereza del Dictionnaire de Larousse que afirma lo que ignoraEl celebrado escritor mejicano don Francisco Pimentel ha publicado su erudita obra Historia criacutetica de la literatura y las ciencias en Meacutejico desde la conquista hasta nuestros diacuteas es un trabajo que comprende cuatro partes divididas asiacute Novelistas oradores historiadores y autores cientiacuteficos Por esta breve relacioacuten se comprende que es temeridad indisculpable pretender dar noticias del movimiento intelectual en el virreinato de Meacutejico sin conocer las obras de Pimentel y de Garciacutea Icaz-balceta ni la edicioacuten primitiva o corregida de Beristain (126)

En los maacutes importantes nuacutecleos urbanos de Meacutexico y Peruacute se podiacutea apreciar clara-mente la participacioacuten directa de la mujer en las maacutes diversas actividades sociales y cul-turales Esta participacioacuten llegoacute incluso al extremo de algunas mujeres que insultaron li-teralmente a las autoridades competentes cuando lo creyeron necesario laquoEstas mujeres que lloran seriacutean las mismas que creyeron como causa principal de aquellas muertes las disposiciones de las Leyes Nuevas porque no tuvieron empacho de insultar al virrey Blasco Nuacutentildeez Vela a quien lsquodieron gritasrsquo (sic) las espantildeolas y lo maldijeron como si llevara consigo la ira de Diosraquo (Borges 52) Lo mismo ocurre en la peniacutensula Dentro del plano cultural durante la primera mitad del siglo XVII destacaraacute entre los escritores de su tiempo Mariacutea de Zayas y Sotomayor gran novelista y defensora de los atributos de su sexo cuya obra narrativa y dramaacutetica disfrutoacute de una gran popularidad en la peniacuten-sula asiacute como en Hispano-Ameacuterica laquoCasi no ha habido novelista maacutes simpaacutetico a los lectores espantildeoles que Dontildea Mariacutea de Zayas seguacuten las muchas reimpresiones que se han hecho de sus obrasraquo (E Fernaacutendez de Navarrete xcvii) Entre sus admiradores contoacute

140 JUAN FRANCISCO MAURA

con el infatigable y genial Lope de Vega que la elogioacute en su obra El laurel de Apolo laquoNo desaprovechoacute Dontildea Mariacutea ninguna ocasioacuten de abogar por las mujeres contra la tiraniacutea de los hombres suponiendo que como deacutespotas las quieren ignorantes para tenerlas sujetasraquo (E Fernaacutendez de Navarrete xcvi)

Pero no tiene que ser exclusivamente una mujer la que defienda los atributos y los derechos de su sexo Se podriacutean citar varios ejemplos donde desde los inicios de las letras espantildeolas la mujer aparece comprendida e incluso defendida por escritores con-temporaacuteneos Veacuteanse los siguientes versos escritos en el siglo XIV por el genial Arcipres-te de Hita

Mujeres abrid los oiacutedos y escuchad una buena leccioacuten escuchad estas palabras guardaos del varoacuteniexclGuardaos no os acaezca como el leoacutenal asno sin orejas y sin su corazoacuten(892)133

No se puede despreciar la influencia que tuvo en la Espantildea del siglo XVI Erasmo de Roacutetterdam el intelectual maacutes reputado de su tiempo Erasmo con una clarividencia mental poco comuacuten trata de los temas maacutes cotidianos asiacute como de los maacutes profun-dos Sus escritos siempre al borde de lo hereacutetico dejaron bien claro su independencia ideoloacutegica Tambieacuten supo dar su opinioacuten sobre las mujeres y de la importancia que una buena educacioacuten supondriacutea a la hora de llevar a cabo las tareas diarias

With regard to female education Erasmus is unequivocal In Abbatis et eruditae he categorically states that education and learning are as desirable in a woman as in a man And although there is naturally no suggestion that the education and learning should be directed towards a career there are no carping restrictions as to what the education should consist of or where the learning should end (McKendrick 9)

Fue una mujer en particular la que llamoacute la atencioacuten del erudito holandeacutes Catalina de Aragoacuten hija de Isabel la Catoacutelica Grandes debieron ser las virtudes de esta dama cuando tan renombrados laquolibrepensadoresraquo la calificaban como laquomilagro del aprendi-zaje femeninoraquo

At the centre of the movement was a Spanish woman Catherine of Aragon first wife of Henry VIII of England Her mother Isabel la Catoacutelica had made sure that Catherine and her sisters received an advanced and enlightened education under two eminent Italian hu-manists Antonio and Alessandro Geraldini and Catherine herself was considered by Erasmus and Sir Thomas Moore to be a miracle of fe-male learning At her request Juan Luis Vives between 1524 and 1528 wrote his De institutione feminae christianae for her daughter Mary and he dedicated it to Catherine (McKendrick 6)

La pobre Catalina ya presagiaba su triste final Existe una dramaacutetica y muy poco co-nocida carta conservada en la Academia de la Historia donde eacutesta escribe a su sobrino el emperador Carlos V pidieacutendole ayuda y proteccioacuten a su desesperada situacioacuten en Inglaterra

133 Juan Ruiz Libro de Buen Amor 193

141ESPANtildeOLAS DE ULTRAMAR EN LA HISTORIA Y EN LA LITERATURA

Muy alto y poderoso sentildeor por las letras que a vuestra magestad e escrito a visto el tenor que siempre en este my negocio e tenido agora que veo el peligro que tanto tiempo lo e esperado torno a suplicar lo mismo que asta agora e echo y es que por permisioacuten de dios y por el deudo y sangre que entre vuestra magestad y my ay quiero de vos es-pecial memoria del peligro en que estoy y de los ynconvenientes que se espera allende que dios muy grande mire para ofendido si el Rey my sentildeor pone en efecto lo que todo este reyno tome en este parlamento de todo lo que para estar informado vuestra magestad por su embaxa-dor que aquiacute reside para el remedio tengo esperanza en dios bastaraacute lo que vuestra alteza proveeraacute conque se aga con tiempo no tengo maacutes que decir sino que todo ese reyno y maacutes los perlados y doctas personas que en esta causa defienden estaacuten muy sentidos de la dilacioacuten que su santidad del papa en este negocio a dado y quexanse mucho dello pues por vuestra parte nunca sino justicia se le a demandado y estaacuten el diacutea de oy tan firmes como asta agora para averlo de declarar donde fueren y debe ser entyendese esto poniendo la question como puacuteblicamente se platica que para en lo secreto no ay necesidad de ablar en ello y crea vuestra magestad de que esta verdad y dios me sostienen porque para proseguir mis trabajos no vastaraacute cuerpo humano y confiando en eacutel le suplico guarde la vida de vuestra magestad y acreciente su estado como yo deseo Degramache a 11 de enero= Humilde tiacutea de vuestra magestad= Catalina (RAH Atoacutegrafo precioso Caja 3 Nuacutem 23 Dontildea Catalina de Aragoacuten Reina de Inglaterra Antildeo 1530 Carta al emperador Carlos V pidieacutendole proteccioacuten)

La pobre Catalina presagiaba su triste fin ya que seis antildeos despueacutes la que fuera hija menor de los Reyes Catoacutelicos pasariacutea a mejor vida El no haber podido dar un hijo he-redero al rey Enrique VIII hizo que eacuteste se casase con Ana Bolena declarando nulo su matrimonio anterior sin consentimiento del Papa Roma le excomulgoacute pero eacutel mismo se proclamoacute jefe de la iglesia anglicana A pesar de todo Catalina muere enamorada de su marido y estas uacuteltimas liacuteneas con las que termina su uacuteltima carta y su vida son sufi-cientemente expliacutecitas laquoJuro que sobre todas las cosas mis ojos desean volver a verosraquo (Ximeacutenez de Sandoval 131)

Pese a la enorme influencia directa o indirecta que Erasmo tuviese sobre los pensado-res de la Espantildea del siglo XVI no debemos dejar de destacar tambieacuten la de Fray Luis de Leoacuten tanto por su cariz independiente como por ser un defensor de la libertad indivi-dual Auacuten siendo un representante de la iglesia Catoacutelica tuvo como se sabe que sufrir sus criacuteticas y el rechazo a la exposicioacuten de sus ideas escritos y traducciones biacuteblicas Fray Luis en su obra La perfecta casada deja clara su idea sobre la mujer y la funcioacuten que eacutesta debiacutea ocupar en la sociedad que le tocoacute vivir Para Fray Luis la mujer no era una imagen idealizada del laquoamor corteacutesraquo como la de los escritores neoplatoacutenicos sino un ser de carne y hueso con derechos y responsabilidades en la sociedad de igual manera que el hombre (McKendric 10)

Seriacutea exagerado afirmar que Fray Luis de Leoacuten pone a la mujer por encima del hom-bre en el contexto social Sin embargo y siempre teniendo en cuenta las limitaciones a

142 JUAN FRANCISCO MAURA

las que su profesioacuten y su tiempo le obligaban procura dejar claro que la mujer (casada) merece todo el respeto y ayuda que sea posible de su marido

Porque aunque es verdad que la naturaleza y estado pone obligacioacuten en la casada como decimos de mirar por su casa y de alegrar y des-cuidar continuamente a su marido de la cual ninguna mala condicioacuten de eacutel la desobliga pero no por eso han de pensar que ellos tienen licencia para serles leones y para hacerlas esclavas antes como en todo lo de-maacutes es la cabeza el hombre asiacute todo este trato amoroso y honroso ha de ser principio del marido Porque ha de entender que es compantildeera suya o por mejor decir parte de su cuerpo (Fray Luis de Leoacuten 21 cap 3)

En el reciente estudio de Mar Martiacutenez Goacutengora Discursos sobre la mujer en el Huma-nismo renacentista espantildeol se presenta esa posicioacuten ambigua del fraile agustino en refe-rencia a la funcioacuten de la mujer en la sociedad renacentista

Fray Luis se opone a la funcioacuten otorgada en la eacutepoca a la mujer de mera imagen pasiva Sin embargo fray Luis totalmente encardinado en la cultura del Renacimiento es consciente de la imposibilidad de ignorar ciertos presupuestos De ahiacute la frecuencia en la que el autor anima a las mujeres a buscar una laquofamaraquo puacuteblica que soacutelo una voz masculina puede proveerles Si la mujer desempentildea perfectamente su funcioacuten de casada el marido recibiraacute honra haciendo posible para ella ser alabada por los miembros de la comunidad (187)

Ya se ha mencionado a Isabel la Catoacutelica como impulsora de toda la empresa ultra-marina pero es precisamente gracias a su influencia cuando se pone de moda entre di-versas damas de su tiempo mdashsiglos XV y XVImdash la praacutectica de ciertos estudios y ciencias Beatriz Galindo conocida popularmente como laquoLa latinaraquo fue la que ensentildeoacute latiacuten a la reina Isabel Dice Juliaacuten Juderiacuteas en su obra La Leyenda Negra laquoA los hombres se unen las mujeres en este afaacuten de saber y vemos a Dontildea Beatriz Galindo maestra de latiacuten de la Reina a dontildea Luciacutea de Medrano que explicoacute los claacutesicos en Salamanca a dontildea Fran-cisca de Lebrija que desempentildeoacute una caacutetedra de retoacuterica en la Universidad de Alcalaacuteraquo (Juderiacuteas 74)

Nos cuenta Eustaquio Fernaacutendez de Navarrete que a la muerte del ceacutelebre Antonio de Nebrija quien a impulsos de la reina catoacutelica publicase la primera gramaacutetica europea en lengua romance su hija Antonia le supliacutea en las clases de filosofiacutea y retoacuterica en la Uni-versidad de Alcalaacute cuando eacuteste se encontraba ya viejo y enfermo (xcvi)

No existe ninguna razoacuten para pensar que las las mujeres de clases maacutes favorecidas que pasaron al Nuevo Mundo no disfrutaran de los mismos beneficios y libertades que sus homoacutelogas peninsulares Seraacute preciacutesamente uno de los hijos del mismo Antonio de Nebrija el doctor Sancho de Lebrija quien se encargue de dar poder a Antoacuten Pareja sastre para que la obra escrita de su padre tanto en latiacuten como en romance se distri-buya y venda laquoasiacute en Indias como en otras partesraquo (AHPS Libro del antildeo 1536 Oficio IV Fragmento de un libro Escribaniacutea Cristoacutebal Becerra Folio Primer tercio del legajo Fe-cha 31 de diciembre) En cuanto a las clases menos favorecidas la monarquiacutea espantildeola se preocupoacute desde un primer momento de alfabetizar a todos sus suacutebditos hembras y varones incluyendo los naturales de los territorios conquistados

143ESPANtildeOLAS DE ULTRAMAR EN LA HISTORIA Y EN LA LITERATURA

La educacioacuten de los indiacutegenas americanos fue una sincera preocupa-cioacuten de los reyes de Espantildea casi desde el descubrimiento del Nuevo Mundo Entre las primeras instrucciones de los Reyes Catoacutelicos a sus gobernadores de las Islas Antillas figuran las dadas a Nicolaacutes de Ovan-do en 1503 ordenaacutendole levantar en cada pueblo una escuela junto a la iglesia laquoen la que todos los nintildeos que hubiere en cada una de dichas poblaciones se junten dos veces al diacutea para que alliacute el capellaacuten les ensentildee a leer y a escribirraquo (Vega 9-10)

En la obra renacentista de Cristoacutebal de Villaloacuten El Crotaloacuten se ofrecen unas imaacutegenes muy graacuteficas de las mujeres de la eacutepoca y del laquoexceso de libertadraquo que seguacuten el autor en boca de uno de sus personajes disfrutaban Desde el punto de vista antropoloacutegico y social las siguientes liacuteneas ofrecen una buena imagen de la apariencia fiacutesica de las mujeres de su tiempo y de su actitud vista desde la perspectiva parcial del personaje de la obra

Pues aun no pienses Demophon que la vanidad y perdicioacuten destas livianas mujeres se le ha de pasar a Dios sin castigo que yo te oso afirmar por cosa muy cierta y que no faltaraacute Que por ver Dios su disolucioacuten desenvoltura desverguumlenza y poco recogimiento que en ellas en este tiempo hay visto que asiacute viacutergenes como casadas viudas y solteras todas por un comuacuten viven muy suelta y muy disolutas en su mirar andar y meneo muy curiosas y que por la calle van con un cu-rioso paso en su andar descubierta su cabeza y cabello con grandes y deshonestas crenchas muy alto y estirado el cuello guintildeando con los ojos a todos cuantos topan haciendo con sus cuerpos lascivos meneos (Villaloacuten 860-61 vol 2 canto 20)

El pasaje antes citado pese a parecer humoriacutestico en nuestros diacuteas no lo era tanto en la eacutepoca en que fue escrito ya que la visioacuten de la mujer como parte integrante del pa-trimonio del padre o del marido podiacutea de alguna manera poner en juego laquola honraraquo de su posesor Pese a esto se aprecia como la mujer teniacutea cierto margen de libertad que no se limitaba a las caacutemaras de un convento o a una vida totalmente alejada del mundanal ruido En la siguiente cita continuacioacuten de la anterior se puede observar la serie de ac-cesorios y aderezos que las mujeres de la eacutepoca utilizaban en sus vestidos y cuerpos llamando la atencioacuten la complejidad y sofisticacioacuten de los atuendos descritos

Por esta su comuacuten deshonestidad se cierto que vendraacute tiempo en el cual ha de hacer Dios un gran castigo en ellas pelarse han todos sus cabellos hacieacutendolas a todas calvas y seraacute tiempo en que les quitaraacute Dios todos sus joyeles sortijas manillas zarcillos collares ajorcas y apretadores de cabeza Quitarles ha los partidores de crenchas tenaci-cas salsericas redomillas y platericos de colores y todo geacutenero de afei-tes sahumerios guantes adobados sebos y unturas de manos y otros olores Alfileres agujas prendedores Quitarles ha las camisas muy del-gadas y los manteos vasquintildeas briales saboyanas nazarenas y rebo-cinos y en lugar de aquellos sus cabellos encrespados y enrifados les daraacute pelambre y calvez y en lugar de aquellos apretadores y joyeles

144 JUAN FRANCISCO MAURA

que les cuelgan de la frente les daraacute dolor de cabeza y por cinta de ca-deras de oro muy esmaltadas y labradas les daraacute sogas de muy aacutespero esparto con que se cintildean y aprieten y por aquellos sus muy curiosos y suntuosos ataviacuteos de su cuerpo les daraacute siacutelici y desta manera haraacute Dios que lloren su lascivia y desorden y que de su lujuria y deshonestidad hagan grave penitencia Entonces no habraacute quien las quiera por su he-diondez y miseria en tanto que siete mujeres se encomendaran a un varoacuten y eacutel de todas huiraacute menospreciaacutendolas y aborrecieacutendolas como de gran mal (Villaloacuten 860-61 vol 2 canto 20)

Excelente lista de aderezos femeninos de los cuales pocos son reconocibles en nues-tros diacuteas Gran frustracioacuten debiacutea de tener con las mujeres el autor de estas liacuteneas sien-do al parecer muy poco correspondido por estas uacuteltimas La misoginia que aparece en estas liacuteneas refleja cierta ingenuidad La mujer que se nos presenta debioacute de ser bastante atractiva y sofisticada portando una gran variedad de adornos muchos de ellos de origen oriental y de perfumes que poco tendriacutean que envidiar a los de la mujer moderna En Descripcioacuten breve de toda la tierra del Peruacute Tucumaacuten Riacuteo de la Plata y Chile obra escrita en Chile entre 1603 y 1609 por el padre Reginaldo de Lizarraga nacido en Medelliacuten (Espantildea) en 1545 y trasladado a Ameacuterica a los quince antildeos vemos una asombrosa semejanza con la cita anterior En esta obra del padre dominico dedicada al entonces presidente del Consejo de Indias conde de Lemos observamos coacutemo su descripcioacuten de la vestimenta de las mujeres de Lima ofrece notables semejanzas con la escrita unos antildeos antes en Espantildea En su capiacutetulo 51 titulado laquoDe los vestidos de las mujeresraquo dice lo siguiente

Lo que en esta ciudad [Lima] se admira mucho y aun lo que se ha-biacutea de refrenar es los vestidos y trajes de las mujeres son en esto tan costosas que casi no se sabe como lo pueden sufrir sus maridos La soberbia de ellas es demasiada y no sabemos en lo que han de venir a parar plegue a Dios y no sea en lo que pararon aquellas de quien dice Nuestro Sentildeor Porque las hijas de Sioacuten se ensoberbecieron (esto es las ciudadanas) cuando saliacutean de sus casas llevaban las gargantas ex-tendidas los ojos altos a una y otra parte guintildeaacutendolos los pasos muy compuestos el Sentildeor las volveraacute calvas y les raeraacute los cabellos de sus cabezas les quitaraacute sus chapines y jerbillas bordadas las medias lunas rodetes las cadenas y collares de oro las ajorcas los tocados costosos los punzones de oro para partir las crenchas los zarcillos y los olores los anillos y piedras preciosas etc y por los olores seles daraacute muy pes-tilencial olor y por las cintas de oro sogas de esparto etc No creo yo hay en lo descubierto del mundo ciudad en su tanto ni cuatro veces mayor que a tanta soberbia en este particular como esta nuestra ciu-dad [Lima] llegue acueacuterdome que los antildeos pasados maacutes ha de treinta y ocho que llegando un religioso nuestro de Espantildea nacido y criado en Toledo a nuestro convento de esta ciudad cerca de la fiesta de Cor-pus Christi tratando de ella y de la suntuosidad majestad y riqueza que aquel diacutea en Toledo en calles y ventanas se mostraba le deciacuteamos que no nos espantase porque en nuestra ciudad veriacutea coacutemo no le ha-

145ESPANtildeOLAS DE ULTRAMAR EN LA HISTORIA Y EN LA LITERATURA

ciacutea mucha ventaja Toledo Llegoacute la fiesta vio la riqueza que se mostroacute en los vestidos de las mujeres adornos de ventanas altares y calles dijo que la riqueza de Toledo en este diacutea mostrada no haciacutea muchas ventajas a la de esta ciudad Pues es cierto que hay tanta diferencia de entonces ahora en lo que vamos tratando como de vestidos de aldea a vestidos de corte con justo tiacutetulo se podriacutea moderar por los virreyes esta soberbia pero no seacute por queacute no se modera y siacute seacute por queacute ni los maridos no tienen aacutenimo para moderarlo ni los gobernadores tampo-co (Lizarraga 38 lib 1 cap 51)

Seriacutea injusto y exagerado afirmar que los descubrimientos transoceaacutenicos se hicieron por la presioacuten que ejercieron las mujeres sobre sus amantes para que estos les trajesen laquomaacutes raacutepidamenteraquo todo ese laquosin finraquo de delicadezas exoacuteticas de todo tipo que existiacutean en el Oriente Lo que siacute es cierto es que las mujeres fueron grandes consumidoras de perfumes afeites sedas joyas y otros bienes suntuarios siendo muy conscientes de lo que hoy entendemos como laquomodaraquo Martiacuten Fernaacutendez de Navarrete en su indispensa-ble trabajo sobre los primeros viajes transoceaacutenicos Coleccioacuten de los viajes y descubrimien-tos menciona de paso la situacioacuten de algunas mujeres durante el siglo XV Es precisa-mente esta eacutepoca en la cual portugueses y castellanos entran en conflicto por el control de algunas posesiones en las costas africanas

y crecioacute el lujo a tal extremo que aun las mujeres de los menestrales y artesanos se confundiacutean en los vestidos con las de alto linaje y esta-do usando ropas de ricas telas de seda de oro de lana con forros de martas y pieles y con guarniciones de oro plata y aljoacutefar cuyo gasto por ser ruina de las familias se tratoacute de corregir aunque sin efecto en las Cortes de Palenzuela (M Fernaacutendez de Navarrete 75 21)

El mismo autor resalta la importancia que tuvo para el comercio de Castilla el contar con una buena armada que protegiese a los barcos de piratas y otros peligros Gracias a los inventarios que se han conservado del duque de Beacutejar y de don Alvaro de Zuacutentildeiga conocemos el lujo de estos sentildeores en perlas orientales piedras preciosas telas y demaacutes utensilios de gran valor134 Existe una Real Pragmaacutetica de Fernando el Catoacutelico a Diego Coloacuten en donde aparece nuevamente la conciencia que se teniacutea sobre la manera de ves-tir que deberiacutean llevar las damas castellanas

R PRAGMAacuteTICA SOBRE EL VESTIR Y GASTAR SEDA EN LAS IN-DIAS Valladolid 12 de noviembre de 1509 Don Fernando etc A vos Don Diego Coloacuten nuestro Almirante y Gobernador de las Indias del mar Oceacuteano y a otro cualquier mi Gobernador etc Sepades que yo he sido informado de los muchos gastos y costas que se han hecho y facen y se esperan hacer si yo no lo mando proveer y remediar en el vestir y gastar de las sedas y brocados y bordados en la Isla Espantildeola y en las otras islas y poblaciones de las dichas islas del mar Oceacuteano tra-yendo en ello mucho desorden y yo por el amor y voluntad que tengo

134 AGI Indiferente 418 Libro 2 fol 87v Publicada en DH Am Tom 6 paacutegina 191 DIA Tomo 31 pag 470 DIU Tomo 5 paacuteg 166 Seguacuten la RC a Diego Coloacuten fechada a 14 de noviembre de 1509 es la pragmaacute-tica que se guarda en Castilla sobre la manera de vestir (DIU Tomo 5 paacutegina 174)

146 JUAN FRANCISCO MAURA

a esas dichas Indias y a los pobladores dellas y porque deseo que ellas se aumenten y acrecienten por las haber ganado y descubierto por la gracia de Nuestro Sentildeor con nuestra industria trabajo y costa y los po-bladores dellas no hagan sobre lo suso dicho tan excesivos gastos sino pues que van a ellas con deseo y voluntad de se ayudar y aprovechar del oro que por gracia de Nuestro Sentildeor se descubre de cada diacutea se detengan en lo gastar en semejantes cosas para se aprovechar dellos en otras cosas que maacutes les convenga asiacute para sus personas como para sus haciendas y por evitar y excusar lo suso dicho mandeacute lo platicar con algunos de mi Consejo y por ellos visto se halloacute que porque nuestros suacutebditos y naturales que viven y estaacuten en dichas Indias no gasten sus haciendas en semejantes desoacuterdenes y que las conserven y guarden pa-ra sus menesteres y por el bien y el pro comuacuten de todos generalmente mando dar esta mi carta premaacutetica sancioacuten la cual quiero y mando que haya fuerza y vigor de ley bien ansiacute y a tan cumplidamente como si fuese fecha y promulgada en Cortes por lo cual ordeno y mando que en cuanto a mi merced y voluntad fuere ninguna ni algunas personas de cualquier ley estado condicioacuten que sean que estuvieren de morada o vivienda o en otra cualquier manera en la dicha Isla Espantildeola y en las otras islas desas dichas Indias y tierra firme no puedan traer y traigan ropa alguna de brocado ni de seda ni de chamelote de seda ni zarzahaacuten ni tercenel ni tafetaacuten ni vainas ni correas de espada ni en cinchas ni en sillas ni en alcorques ni en cosa alguna ni tampoco puedan traer ni trai-gan bordados de seda ni chapado de plata ni de oro de martillo ni fila-do ni tejido ni de otra cualquier manera pero que las personas que tu-vieren en las dichas Indias bienes asiacute muebles como raiacuteces que valgan hasta la cuantiacutea de mil castellanos que ellos y los hijos que tuvieren de hasta edad de catorce antildeos traigan jubones y caperuzas y bolsas y ribe-tes y pestantildeas de seda de cualquier color que quisieren con tanto que en una ropa no traigan maacutes de un ribete y que no haya en los dichos ribetes y pestantildeas maacutes anchura de cuanto un dedo pulgar y que no se traiga en los ruedos de las ropas y que puedan traer becas de tercenel y de tafetaacuten y de papahigos de camino aforrados en el mismo tercenel y tafetaacuten y ansiacute mismo permitimos que puedan traer de seda las cora-zas y guarnecer las faldas y gocetes y capacetes y baberas y quejotes y traer cojines de seda en la silla de la jineta y que las mujeres de las tales personas que tuviesen bienes en la dicha cuantiacutea de los dichos mil castellanos y sus hijas siendo doncellas puedan traer gonetes y corseacutes y fajas de dos varas de largo de seda y [borradas dos letras por mancha de tinta] mas y de lo de vestir y mudar cuando quisieren y por bien tuvieren quier sea moyil o faldilla o cota o haacutebito u otra cualquier ropa con tanto que juntamente no puedan vestir ni vistan maacutes de una ni les pongan trepas ni tiras de seda ni de brocado ni de oro tirado ni tejido ni relido ni en las ropas de pantildeo pongan cortapisas ni lisonjas ni trepas ni tiras ni otra guarnicioacuten alguna de seda ni de brocado salvo que puedan traer un ribete o pestantildea de seda de anchura de un dedo pulgar asiacute en

147ESPANtildeOLAS DE ULTRAMAR EN LA HISTORIA Y EN LA LITERATURA

las ropas de seda como en las de pantildeo en los ruedos de las faldas y para las costuras y no otra cosa alguna y que no traigan la dicha seda en las guarniciones de las mulas ni en angarillas ni en sillas ni en pantildeos ni en otra cosa alguna y que ansiacute mismo no puedan traer mantillas de seda ni enforradas en seda sopena que l que contrario hiciere pierda las ro-pas que ansiacute trujere vestidas por primera vez y sea repartido la mitad para el juez que lo juzgare y la otra mitad para el juez que lo acusare y por la segunda que pierda la ropa y se parta como dicho es y sean desterrados de la isla donde viviere para dos antildeos y por cuanto algu-nas personas de los que nuevamente destos reinos de Castillaa van a se avecindar y poblar y estar en las dichas Indias y son de honra acae-ce que no llevan tantos bienes que valgan la dicha cuantiacutea de los mil castellanos que mando que tengan los que hubieren de traer seda en la manera que dicha es que a eacutestos tales no se entienda y extienda lo suso dicho y que puedan traer la dicha seda seguacuten y en la manera que dicha es y no maacutes hasta tanto que haya un antildeo que estaacuten en las dichas Indias que corra y se cuente desde el diacutea que llegare fasta ser cumplido y que siacute cumplido no tuviere bienes que valgan la dicha cuantiacutea de los dichos mil castellanos que no puedan traer seda ninguna so la dicha pena de suso contenida la cual mando a vos las dichas nuestras justi-cias y a cada una de vos que esta mi carta y todo lo en ella contenido y cada cosa y parte dello guardeacuteis y cumplaacuteis y ejecuteacuteis por manera que se cumpla y ejecute lo en ella contenido so pena de perdimiento de los oficios y que seades inhaacutebiles para haber otros semejantes y que pagueis la estimacioacuten de la tal ropa que dejardes de ejecutar y para que lo susodicho sea notorio y ninguno dello pueda pretender ignorancia mando que esta mi carta sea pregonada puacuteblicamente por las plazas y mercados y otros lugares acostumbrados desas dichas islas por prego-nero y ante escribano puacuteblico(Konetzke Coleccioacuten 23)135

Tambieacuten se sabe de las joyas que Rodrigo Ponce de Leoacuten marqueacutes de Caacutediz debioacute dar a dontildea Beatriz Pacheco (M Fernaacutendez de Navarrete 75 22) Lo que siacute queda claro es que la navegacioacuten seraacute a partir de estos antildeos la forma maacutes raacutepida e importante para comerciar con aquellos paiacuteses de Oriente que antes soacutelo era posible alcanzar a traveacutes de rutas terrestres Existe un documento muy representativo de este periodo sobre la posesioacuten de joyas de gran valor por parte de miembros de una de las familias maacutes repre-sentativas residentes en Ameacuterica Los protagonistas son en este caso el almirante Diego Coloacuten y su mujer Mariacutea de Toledo Dice el documento que El jurado Antoacuten Bernal y Juana de Hoces su mujer vecinos de Sevilla en la collacioacuten de Santa Cruz reciben de Diego Coloacuten Almirante de las Indias laquoun joyel muy rico de oro de hechura de escudo que tiene en medio una piedra preciosa grande esmeralda e debaxo de la dicha piedra un rostro de aacutengel labrado en el mismo oro esmaltado e a cada lado del dicho rostro una piedra preciosa diamante pura y debaxo una piedra gruesa pendiente que pesa el dicho

135 AGI Indiferente 418 Libro 2 fol 87v Publicada en DH Am Tom 6 paacutegina 191 DIA Tomo 31 pag 470 DIU Tomo 5 paacuteg 166 Seguacuten la RC a Diego Coloacuten fechada a 14 de noviembre de 1509 es la pragmaacutetica que se guarda en Castilla sobre la manera de vestir (DIU Tomo 5 paacutegina 174)

148 JUAN FRANCISCO MAURA

joyel con todo lo susodicho medio marcoraquo Los citados Antoacuten Bernal y su esposa se dan por pagados de todo lo que se les adeudaba y se obligan a su vez a devolver el joyel al Almirante si este les paga en dinero El 23 de agosto de 1530 siete antildeos despueacutes la virreina canceloacute la anterior obligacioacuten y recuperoacute el mencionado joyel (AHPS Libro del antildeo 1523 Oficio I Escribaniacutea Alonso de la Barrera Folio 1173 Fecha 3 de diciembre) En la misma casa del almirante otra mujer Briolanga Muntildeiz su tiacutea materna se obliga a pagar al mercader genoveacutes Batista Catantildeo 22 ducados de oro laquopor cierto raso que le comproacute y habiacutea de ser pagado en el puerto de Santo Domingoraquo (AHPS Libro del antildeo 1509 Oficio V Libro uacutenico Escribaniacutea Francisco Esquibel Folio Primer tercio del lega-jo Fecha 9 de marzo) Dontildea Briolanga recibiacutea cada antildeo para su mantenimiento 100000 maravediacutes del almirante mayor de las Indias por medio de Gaspar Gurricio monje del monasterio de Santa Mariacutea de las Cuevas (AHPS Libro 1510 Oficio XV Libro II Es-cribaniacutea Bernal Gonzaacutelez Vallesillo Folio primer tercio del legajo Fecha 4 de julio) Resulta interesante hacer notar la temprana presencia (1516) de un ingleacutes en Santo Domingo involucrado igualmente en la compra de telas Se trata de laquoNicolas Arnoteraquo residente en Santo Domingo que debe pagar a Mariacutea Caldera mujer del comendador Diego Barbosa el valor de una cama de sargas de colores de Flandes (AHPS Libro del antildeo 1516 Oficio XV Libro II Escribaniacutea Bernal Gonzaacutelez Vallesillo Folio Primer tercio del legajo Fecha 28 de agosto) Sin embargo anteriormente a esa fecha (1514) encontramos a un veneciano casado con una inglesa mucho maacutes ceacutelebre en sus viajes trasoceaacutenicos laquoSevastiaacuten Cavotoraquo capitaacuten del rey don Fernando y vecino de Sevilla136

De forma paralela se observa tambieacuten un cierto desenvolvimiento de la mujer en su medio lo que equivaliacutea a intercambios de informacioacuten a todos los niveles incluyendo por lo tanto el cultural No era extrantildeo que tuviesen libros de comedias a mano y que llegasen incluso a escribir comedias ellas mismas Efectivamente la sospecha de que las damas llegasen a escribir comedias estaba bien fundada Veacuteanse algunos ejemplos Ana Caro Malleacuten de Soto una de las maacutes famosas dramaturgas de la Sevilla del siglo XVII autora de El conde de Partinupleacutes utiliza el tema del amor en sus maacutes diversas variantes fiacutesicas y espirituales como el eje de casi todas sus obras (Perry 57) Este hecho por otra parte indica el favor del puacuteblico ante un tema tan popular Veacutease otro ejemplo

The drama of this period did not present love and marriage as a simple partnership however and many dramatists contrasted laquoprofaneraquo with laquohonestraquo love Feliciana Enriacutequez de Guzmaacuten who wrote Tragicome-dia Los jardines y campos sabeos in Seville in the early seventeenth cen-tury presented the hero Clarisel as the victim of laquopervertedraquo and fickle Belidiana in part 1 so blinded by her beauty that he feels himself laquoin shackles and in chainsraquo (Perry 57)

Pero las damas espantildeolas de esta eacutepoca no soacutelo escribiacutean comedias algunas tambieacuten se aventuraron a escribir tratados cientiacuteficos Uno de estos casos fue el de Oliva Sabu-co de Nantes Barrera que a finales del siglo xvi escribioacute un tratado meacutedico sobre la naturaleza humana advirtiendo que la lujuria podiacutea perjudicar al cuerpo Se basaba en

136 Sebastiaacuten Caboto o laquoSevastiaacuten Cavotoraquo estaba casado con Juana Cavoto vecina que fue de la ciudad de Londres en la parroquia de San Gil (AHPS Libro del antildeo 1514 Oficio I Libro II Escribaniacutea Mateo de la Cuadra Folio 253 Fecha 14 de Septiembre) citado en CFAAPS Vol 3 doc 128 p 37

149ESPANtildeOLAS DE ULTRAMAR EN LA HISTORIA Y EN LA LITERATURA

la presuncioacuten de que la lujuria provocaba que el cerebro emitiese un liacutequido que iba al estoacutemago enfriaacutendolo y debilitaacutendolo interrumpiendo de esta manera las funciones vitales (Perry 58)

Se sabe que en la eacutepoca de Isabel la Catoacutelica habiacutea muchas mujeres estudiantes y que la propia reina las impulsaba a estos menesteres iniciativa que obtuvo sus frutos en las deacutecadas siguientes Ademaacutes de las conocidas novelistas Mariacutea de Zayas y Sotomayor y dontildea Mariana de Carvajal existioacute toda una serie de escritoras de todos los geacuteneros lite-rarios que florecieron a ambos lados del Atlaacutentico y que no solamente llaman la aten-cioacuten por su nuacutemero sino por la calidad de sus obras Algunas de ellas como dontildea Luisa de Padilla condesa de Aranda calificada por Serrano y Sanz como laquola maacutes notable de cuantas florecieron en Espantildea en el siglo XVIIraquo personificaraacuten a la perfeccioacuten a este tipo de mujeres Tambieacuten deberiacuteamos saber cuaacutentas seriacutean las mujeres que escribieron con pseudoacutenimos masculinos

La informacioacuten sobre las diferentes facetas de la vida femenil con que contamos no es abundante A pesar de todo podemos hacernos una idea maacutes clara de la verdadera situacioacuten de la mujer a traveacutes de una nueva interpretacioacuten de los textos tanto de los medievales como de las croacutenicas de los primeros antildeos del descubrimiento y conquista Algunos estudios relativamente recientes surgidos por el intereacutes general que suscita todo lo concerniente a la mujer han ayudado a considerar nuevas perspectivas La eru-dicioacuten moderna estaacute poniendo en tela de jucio los estereotipos tradicionales en cuanto a la pasividad y relevancia femeninas asiacute como al tradicional misogenismo que se atri-buye a la eacutepoca medieval Cada vez estaacute maacutes claro que la existencia de estas mujeres variaba considerablemente seguacuten la eacutepoca posicioacuten social o situacioacuten geograacutefica por lo que hacer valoraciones categoacutericas sobre laquola situacioacuten de la mujerraquo puede llevar a graves equivocaciones (Dillard 9) Es fundamental para comprender a la mujer espa-ntildeola que pasoacute al Nuevo Mundo tener en cuenta las enormes diferencias de todo tipo que existieron en la sociedad castellana y novomundista Un pintoresco ejemplo es el de laquolas tapadasraquo una usanza de origen aacuterabe que se pondriacutea de moda en Castilla poco despueacutes de la toma de Granada por los Reyes Catoacutelicos y que despueacutes pasariacutea al Peruacute Esta tradicioacuten ha perdurado en algunos pueblos de Espantildea hasta relativamente poco tiempo pueblos como Mojaacutecar (Almeriacutea) y Vejer de la Frontera (Caacutediz) son ejemplo de esta costumbre tambieacuten conocida como el de las laquocobijaacutesraquo

Tras la caiacuteda del reino musulmaacuten de Granada en 1492 la corona espa-ntildeola prohibioacute a las mujeres aacuterabes de Andaluciacutea vestir los velos islaacutemi-cos que cubriacutean sus rostros y ocultaban su identidad No era faacutecil des-arraigar esta costumbre tan ancestral y secular y el emperador Carlos asiacute como su hijo el rey Felipe II tuvieron que repetir la prohibicioacuten Cuando finalmente las moras fueron obligadas a abandonar sus velos y a adoptar el chal castellano comenzaron a utilizar la nueva prenda para cubrir sus rostros dejando al descubierto soacutelo uno de los ojos Esta nueva moda en el uso del chal tradicional nos asegura leoacuten Pi-nelo era extremadamente graciosa sensual y atractiva a causa de la belleza exoacutetica de los ojos de las moras Las mujeres cristianas de Granada Coacuterdoba y Sevilla imitaron pronto la nueva moda de llevar el chal y asiacute nacioacute la laquotapadaraquo hispana Desde Sevilla la nueva moda

150 JUAN FRANCISCO MAURA

fue a las colonias de ultramar y tomoacute raices especialmente en el Peruacute (Martiacuten 317-18)

En un reciente estudio sobre la educacioacuten de la mujer en la Ameacuterica virreinal apare-cen algunos ejemplos significativos de mujeres espantildeolas que consagraron gran parte de sus vidas a la tarea docente Dentro del proceso educativo de las espantildeolas que fueron a las Indias destaca el papel de dontildea Catalina de Bustamante Joseacute de Jesuacutes Vega y Ma-riacutea Luisa Caacuterdenas de Vega dicen en su obra Ameacuterica Virreinal La Educacioacuten de la mujer que esta mujer pocos antildeos despueacutes del descubrimiento del Nuevo Mundo se dedicoacute a trabajar en favor de los indios aunque por desgracia su nombre y sus hechos en la labor docente hayan sido ignorados por los historiadores modernos (Vega 12-13)

Son varias las veces que se nombra a Catalina de Bustamante en el citado estudio y varias las fuentes antiguas en que se recoge la presencia de tan distinguida laquomatrona muy honrada y de buen ejemploraquo de la que ya hablaba Zumaacuterraga y sobre la que se hizo un informe enviado a Carlos V describiendo sus actividades en la Nueva Espantildea firmado por cuatro de los misioneros maacutes conocidos de Meacutexico

El informe dice que los franciscanos de Texcoco acababan de cons-truir un nuevo monasterio y cedido el antiguo A una honrada y honesta y muy virtuosa matrona que se dice Catalina de Bustamante para que ende instruyese a las hijas de los sentildeores de la comarcala cual con el favor de Dios y limosnas que don Hernando [Corteacutes] les haciacutea para su sustentacioacuten [teniacutea en esa casa-hogar] hasta trescientas mujeres antes maacutes que menos (Vega 14)

Estas laquocasas-hogarraquo no estaban regentadas necesariamente por monjas sino por lo que llamaban laquobeatasraquo mujeres que sin estar estar sujetas a la autoridad eclesiaacutestica se dedicaban a un laquolucro honestoraquo Llamadas tambieacuten laquobeateriosraquo eran diferentes a los conventos de monjas y constituiacutean las primeras escuelas de la mujer en la Nueva Espa-ntildea (Vega 20-21) Fue gracias al ejemplo de mujeres como Catalina de Bustamante que dedicaron sus vidas a la educacioacuten de los indiacutegenas que existiesen otras continuando su ejemplo Motoliniacutea dice claramente que laquode ese primer encerramiento (el de Texcoco regentado por Catalina) salieron otras honestas y muy virtuosas duentildeas que ensentildeaban a las maacutes menudasraquo (Vega 23)

Pero dontildea Catalina de Bustamante pese a ser una singular mujer y la iniciadora de la educacioacuten de la mujer en Meacutexico no fue un caso aislado corresponde maacutes bien a un patroacuten al que se ajustaron muchas de las pioneras de la Nueva Espantildea que sembraron instituciones de educacioacuten de la mujer En 1530 unos antildeos maacutes tarde aparecioacute una de las grandes protectoras de la instruccioacuten femenina en Ameacuterica La emperatriz Isabel de Portugal (Vega 24)

Desde comienzos de la conquista fueron varios los centros docentes regentados por mujeres en los que la ensentildeanza no estaba impartida por monjas Una de las institucio-nes maacutes sobresalientes del sistema educativo fue el Colegio de Nintildeas que se establecioacute en la ciudad de Meacutexico a principios del siglo XVI con maestras que no eran monjas Estas seglares conocidas comunmente como laquomigasraquo eran las descendientes de las antiguas beatas Su ubicacioacuten permanente fue determinada en 1548 lugar que serviriacutea de escue-la ininterrumpidamente hasta 1862 cuando el edificio fue convertido en bodega (Vega 60) No se debe perder de vista que no soacutelo por el hecho de llevar una vida secular se

151ESPANtildeOLAS DE ULTRAMAR EN LA HISTORIA Y EN LA LITERATURA

gozaba de maacutes privilegios Era maacutes bien al contrario En las carreteras las mujeres segla-res no inspiraban el mismo respeto que las monjas que ademaacutes teniacutean contacto cons-tante con personas de los dos sexos no pertenecientes a la Iglesia (Arenal 297) Ademaacutes dentro de las murallas del convento desapareciacutean muchas de las barreras sociales que limitaban a la mujer de esta eacutepoca

La presencia femenina y la monarquiacutea

Pues iquestcoacutemo sabes tuacute preguntoacute don Quijote que los grandes llevan detraacutes de siacute a sus caballerizos Yo seacute lo direacute respondioacute Sancho Los antildeos pasados es-tuve un mes en la corte y alliacute vi que paseaacutendose un se-ntildeor muy pequentildeo que deciacutean que era muy grande un hombre le seguiacutea a caballo a todas las vueltas que daba que no pareciacutea que era su rabo Pregunteacute que coacutemo aquel hombre no se juntaba con el otro sino que siempre anda-ba tras deacutel Respondieacuterome que era su caballerizo y que era uso de grandes llevar tras siacute a los tales Desde enton-ces lo seacute tan bien que nunca se me ha olvidado (Cervan-tes Don Quijote)

Los monarcas espantildeoles fueron conscientes de que sin la presencia femenina difiacute-cilmente se podriacutea solidificar una conquista a todos los niveles La mayor parte de los virreyes y altos cargos trajeron a sus mujeres con ellos y en las ciudades principales de Hispano-Ameacuterica como la ciudad de Meacutexico Guatemala Lima o Potosiacute habiacutea mujeres que disfrutaban de una esmerada educacioacuten (gramaacutetica latiacuten poesiacutea historia muacutesica) Esto dariacutea origen a una elegante y hasta cierto punto sofisticada sociedad en la que las mujeres tomaron parte en asuntos maacutes importantes que los que sus homoacutelogas toma-ran en las colonias portuguesas laquoThere were brilliant vice-regal courts at Mexico City and Lima far exceeding anything that could be found in Portuguese or English America during the seventeenth centuryraquo (Boxer 39) Las estadiacutesticas con las que contamos hoy no soacutelo demuestran que las mujeres llegaron al Nuevo Mundo en respetables porcen-tajes sino que ademaacutes tuvieron una participacioacuten activa llegando a intervenir en algu-nos casos en las liacuteneas de vanguardia Resulta difiacutecil aproximarse al estado de aacutenimo de aquellas mujeres que vivieron en eacutepocas tan lejanas Para ello es necesario indagar en los documentos de la eacutepoca para lograr rescatar del pasado todos esos tesoros de la historia muchas veces tergiversados y manipulados con el fin de que sirvan a propoacutesi-tos actuales Es en los viejos manuscritos donde queda testimoniada su presencia tan rica en dolores tragedias y por queacute no en amores Fue la llegada de estas mujeres una brisa de esperanza y de ilusioacuten para aquellos que ya estaban en las tierras de ultramar y

152 JUAN FRANCISCO MAURA

veiacutean venir de su propia tierra aquello que maacutes antildeoraban amantes madres hermanas Un haacutelito de vida y poesiacutea que suavizaba las costumbres de estos rudos y romaacutenticos pioneros laquoporque para ser hombres de tales empresas algo de romaacutentico debioacute de existir en ellos y que es tan propio del espantildeol y abandonariacutean en brazos tan gentiles sus bruscos modales que habiacutean adquirido en aacutespero contacto en selvas y montantildeasraquo (Villafantildee 125)

Hoy sabemos que en la normativa oficial de la Espantildea del siglo XVI y XVII se favoreciacutea el paso de mujeres al Nuevo Mundo Afirmar lo contrario no solamente es falso sino que implica un desconocimiento total de los primeros dos siglos de la colonizacioacuten espantildeola La presencia de estas mujeres espantildeolas fue efectiva laquolas disposiciones al respecto demuestran claramente que se teniacutea especial intereacutes en su arraigo y que se tra-taba de defender su posicioacuten de mujeres casadas con conquistadores y colonizadoresraquo (Villafantildee 126) Los monarcas comprendiacutean que era praacutecticamente imposible que los hombres viviesen sin mujeres y que de ser asiacute era de esperar que se cometiesen abusos con las indias lo que incidiriacutea en la moral social y en el buen gobierno de la colonia Ademaacutes sin un asentamiento definitivo con hogares y familias difiacutecilmente se podriacutea llevar a cabo una presencia permanente en las nuevas colonias (Orsquo Sullivan-Beare 45)

Empezando por los Reyes Catoacutelicos la preocupacioacuten de que en las colonias se esta-bleciesen nuacutecleos que tuviesen como base la familia cristiana fue clara Las capitulacio-nes que a este efecto se hicieron entre los conquistadores y la Corona fueron nume-rosas La efectuada entre Rodrigo de Baacutestidas y Carlos V puede ser un buen ejemplo Fechada en Valladolid el 6 de noviembre de 1524 muestra el propoacutesito de Baacutestidas de establecer una colonia permanente en la desembocadura del riacuteo Magdalena en el terri-torio que hoy vendriacutea a corresponder a Colombia El documento firmado por el Empe-rador comienza asiacute

El Rey Por cuanto por parte de vos Rodrigo de Baacutestidas vecino de la ciudad de Santo Domingo de la Isla Espantildeola Me fueacute fecha relacioacuten que por servicio de la Catholica Reyna Mi Sentildeora e Nuestro os ofre-ceacuteis de poblar e poblariades la provincia e puerto de Santa Marta que en Castilla de Oro llamada la Tierra Firme e que la poblariades dentro de dos antildeos siguientes haciendo en ella un pueblo en que no menos haya en eacutel al presente cincuenta vezinos que los quince de ellos sean casados y tengan consigo a sus mujeres y que lo teniades fecho dentro de dos antildeos y de hoy en adelante lo maacutes que fuese posible asiacute de cris-tianos espantildeoles como de indios (Restrepo 1 30)

De igual manera el priacutencipe Felipe (futuro Felipe II) en las capitulaciones establecidas en 1547 con Juan de Sanabria para que eacuteste fuese como gobernador y capitaacuten general de la dicha provincia escribe lo siguiente laquoPrimeramente que seais obligado e os obligeis a llevar destos Reynos de Castilla a la dicha provincia del Rio de la Plata cien casados con sus mujeres e hijos para poblar la dicha provincia y con ellos llevareis a vuestra muger e hijos (CDI de Ameacuterica y Oceaniacutea 23 119)

En numerosas ocasiones se pone de manifiesto el apoyo de la monarquiacutea a la emigra-cioacuten femenina tantas que difiacutecilmente se podriacutean enumerar todos los casos Lo cierto es que la legislatura vigente favoreciacutea la emigracioacuten y traslado de mujeres con toda una se-

153ESPANtildeOLAS DE ULTRAMAR EN LA HISTORIA Y EN LA LITERATURA

rie de alicientes137 sobre todo si eacutestas estaban casadas pasaje para llevar a las familias franquicia de derecho para los artiacuteculos que portasen consigo favoritismo en cargos destinos y contrataciones a aquellos que pasasen con sus mujeres incluyendo ademaacutes de los castellanos y leoneses a suacutebditos de otras partes de la corona incluso genoveses y portugueses si estos veniacutean acompantildeados de sus consortes (Fernaacutendez Duro 15-16)

Incluso se llegoacute a imponer penas a aquellos hombres casados que no llevasen a sus mujeres con ellos a Indias en el teacutermino de un antildeo El mismo emperador en una ceacutedula otorgada al virrey de la Nueva Espantildea le recomendaba que laquoprocurase persuadir a ca-sarse a los solteros que estuviesen en edad y situacioacuten de hacerloraquo prometieacutendoles que al efectuar el matrimonio seriacutean preferidos en el reparto de indios En la isla de San Juan de Puerto Rico los cargos oficiales y oficios puacuteblicos debiacutean de ser desempentildeados por los casados en primer lugar En Meacutexico ocurrioacute lo mismo con los cargos de corregido-res (Konetzke laquoemigracioacutenraquo 140-41) Felipe II al igual que sus antecesores y sucesores reiteraraacute y justificaraacute los beneficios de los que seraacuten acreedores aquellos que tengan allaacute a sus mujeres laquoque los que han servido en los descubrimientos de las dichas Indias y tambieacuten los que ayudan a la poblacioacuten dellas que tienen allaacute sus mugeres sean preferi-dos en los aprouechamientos qualesquierraquo mandando que despueacutes de los conquistado-res se tuviera en cuenta para la laquoprovisioacuten de los corregimientosraquo a los colonos casados siempre que estuvieran capacitados para dichos cargos (Konetzke laquoemigracioacutenraquo 141)

Las disposiciones en favor del matrimonio son claras ya sea por medio de un favo-ritismo manifiesto como en los casos antes citados o mediante medidas de cohercioacuten para que esta poliacutetica se llevase a cabo Don Sebastiaacuten Ramiacuterez de Fuenleal obispo de Santo Domingo y presidente de la Audiencia de Meacutexico propuso que a aquellos enco-menderos que no estuviesen casados y que no hubiesen tomado parte en la conquista se les quitase los indios concedidos con la obligacioacuten de devolveacuterselos si en el plazo de un antildeo habiacutean contraiacutedo matrimonio (Konetzke laquoemigracioacutenraquo 142-43) Por supuesto hubo excepciones a estas reglas En algunos casos ni la mujer teniacutea especial intereacutes en vivir junto con su marido en las Ameacutericas ni el marido queriacutea ir a buscar a su mujer pasado el plazo de un antildeo En el presente documento y de forma excepcional las auto-ridades reales protegen a los conyuges para que puedan seguir viviendo separados en continentes diferentes

Nuestras justicias de la ysla de Cubagua e otras qualesquier de las nuestras Yndias yslas e tierra firme del mar oceacuteano e a cada uno e qualquier de vos a quieacuten esta mi ceacutedula fuese mostrada por parte de Alonso de Tapia nuestro veedor de la provincia de Paria me ha sido hecha relacioacuten que ha mucho tiempo que reside en esas partes donde nos ha servido en lo que se ha ofrecido e que agora vos otros le apre-miaacuteis a que venga o embiacutee a estos Reinos por su muger lo cual no puede al presente hazer a causa de no ter posibilidad para ello a mi me ha suplicado vos mandase que no le compeliacuteesedes ny apremiaacutesedes a que viniese o enviase por la dicha su muger y dieacutesedes por libres los fiadores que tenyades para que dentro de un antildeo embiariacutea o verniacutea por

137 Reales Ceacutedulas de los antildeos 1502 y 1503 Academia de la Historia Coleccioacuten Muntildeoz tomo 75 fols 209 y 220 citado por Fernaacutendez Duro 15

154 JUAN FRANCISCO MAURA

ella o como la mi merced fuese lo cual visto por los de nuestro consejo juntamente con una peticioacuten presentada por dontildea Mariacutea Gudiel muger del dicho Alonso de Tapia por la cual nos suplica lo mismo que acor-dado que debiacutea mandar esta mi ceacutedula para vos por la qual vos mando que no compelaacuteis ni apremieacuteis al dicho Alonso de Tapia a que venga ni enviacutee a estos reinos por la dicha su muger si no fuere a que la pro-vea de lo que fuere necesario para su mantenimiento y deys por libres quales quier fianzas que sobre ello haya dado e no fagades ende al por alguna manera Firmado en la villa de Valladolid a VII diacuteas del mes de febrero de mil e quinientos e treinta y siete antildeos yo el licenciado Con-de de Samano y sentildealada del cardenal Beltraacuten y Carbajal [Aparte en letra pequentildea] Este diacutea se despachoacute una provisioacuten por la cuaacutel su Mag hizo merced a Alonso de Tapia de la veedoriacutea de la provincia de Paria por muerte de Garciacutea de Aguilar con las clausulas ordinarias y con el mismo salario que teniacutea Aguilar Firmado del emperador y de Beltraacuten y Bernal y Velaacutezquez El Rey (Registro de disposiciones Riacuteo Marantildeoacuten AGI Indiferente General Legajo 416 libro 2 Fols 94v y 95r)

El punto maacutes interesante a destacar de todas estas disposiciones oficiales en cuanto a la emigracioacuten femenina al Nuevo Mundo no es otro que la libertad que se da a la mujer de decidir si quiere o no casada o sin casar trasladarse al nuevo continente no como una imposicioacuten sino como un precepto laquoel espiacuteritu de las disposiciones en el sentido de asegurar la vida marital de los casados significa que la mujer que su marido invita a pa-sar a las Indias puede negarseraquo (Villafantildee 127) Habriacutea que ver las opciones laquorealesraquo ade-maacutes de las legales y econoacutemicas que le quedaban a la mujer si tomaba esta decisioacuten

El saber la libertad de eleccioacuten que estas mujeres teniacutean de antemano antes de aden-trarse en las interminables penalidades y aventuras que los viajes de la navegacioacuten tran-soceaacutenica suponiacutean hace que sus hechos y esfuerzos cobren auacuten maacutes relieve En nume-rosas ocasiones estas mujeres cruzaron el oceacuteano una y maacutes veces sin otro motivo que el de defender los derechos e intereses de los suyos Lo que resulta maacutes valioso de todo esto es que lo hicieran por propia iniciativa arriesgando sus vidas para que se hiciese justicia y para que no les faltase lo necesario a aquellos que estaban en la otra orilla Las autoridades vigentes conocedoras de los vaciacuteos legales existentes en las nuevas colo-nias se apresuraron a poner en vigor aquellas normas que redundaran en el beneficio de los menos favorecidos por las circunstancias La institucioacuten del matrimonio cuya trans-cendencia es fundamental en la vida juriacutedica y social de la mujer tuvo que ser legislada en Ameacuterica con una serie de nuevas disposiciones agregados modificaciones y aclara-ciones Asiacute pues la legislacioacuten de base espantildeola tuvo que sufrir en tierras americanas esta serie de cambios por motivos poliacuteticos y sociales (Villafantildee 126)

Para hacer un sumario de lo dispuesto hasta el siglo XVI en cuanto a la legislacioacuten de las mujeres que teniacutean familia o intereses en Indias merece la pena mencionar que existieron una serie de disposiciones que protegiacutean a las mujeres para que eacutestas no se viesen abandonadas por sus maridos En un epiacutegrafe de la Recopilacioacuten de 1680 (libro VII tiacutetulo 3) se deja ver claramente la preocupacioacuten de las autoridades en este asunto laquoDe los casados en Espantildea e Indias que estaacuten ausentes de sus mujeres y esposasraquo (Vi-llafantildee 126-27)

155ESPANtildeOLAS DE ULTRAMAR EN LA HISTORIA Y EN LA LITERATURA

La lista de disposiciones se hace interminable En los reinados de Fernando el Catoacute-lico Carlos V Felipe II Felipe III o incluso Carlos II la insistencia es constante La ra-zoacuten de esta insistencia seriacutea bastante obvia dado que con un oceacuteano por medio seriacutean muchos los que se aprovechasen de llevar una doble vida marital sin el estricto control y vigilancia de sus mujeres que se encontraban en la peniacutensula La ley XXVII libro IX tiacutetulo XXVI determina laquoDeclaramos por personas prohibidas para embarcarse y pasar a las Indias todos los casados y desposados en estos reinos lsquosino llevaren con ellos sus mujeresrsquo aunque sean virreyes oidores gobernadores o nos fuesen a servir en cual-quier cargo y oficios de Guerra Justicia y Hacienda porque es nuestra voluntad que todos los susodichos lleven a sus mujeresraquo (Villafantildee 127) laquoLos eclesiaacutesticos eran los en-cargados de dar cuenta a los tribunales competentes de aquellos que estando casados permaneciacutean en Indias sin sus mujeres Son reiteradas las disposiciones de Fernando el Catoacutelico en este sentidoraquo138 En 1514 el rey don Fernando ordena en una provisioacuten para la isla Espantildeola laquodoy licencia eacute facultad aacute cualquier persona naturales de estos Reynos para libremente se puedan casar con mujeres naturales de esa dicha ysla sin tener que incurrir por ello en pena algunaraquo (Villafantildee 129)

No se debe olvidar tampoco a aquellas mujeres que decidieron pasar a las laquonuevas tierrasraquo solteras Estas mujeres tambieacuten tuvieron un papel importante en el desarrollo de las nuevas colonias Los organismos espantildeoles del momento como los mandatarios indianos y todos los cronistas no dejaron pasar desapercibida la importancia social de estas mujeres en la poliacutetica de poblamiento laquo[E]s cierto que los pueblos de Indias nuevamente poblados no se tienen por fijos o estables ni permanentes hasta tanto que mujeres espantildeolas entren en ellos y los encomenderos y conquistadores se casen por muchas causas y respetos buenos y saludables que para ello hayraquo (Villafantildee 126-27)

Si la intencioacuten era la de una presencia permanente en las tierras americanas la mujer soltera que pasase a ellas siempre seriacutea un motivo maacutes para el colono o conquistador de continuar en el mismo suelo Se podriacutea empezar una familia si asiacute se quisiese sin tener que pensar en volver a la metroacutepoli ya fuese a disfrutar de los bienes adquiridos o a laquobuscarraquo una esposa El problema aparecioacute cuando se produjo un exceso de mujeres solteras lo que de alguna manera alteroacute la estructura social existente ya que no habiacutea muchas opciones para ellas aparte del matrimonio o el convento

En consideracioacuten a que la experiencia habiacutea demostrado que un exce-sivo nuacutemero de mujeres ejerciacutea perniciosa influencia sobre la moral y las costumbres se suplicaba al rey no otorgase a aquellas tantas auto-rizaciones para emigrar al Peruacute La ciudad de la Plata fundada en 1538 emite en 1577 un informe en el que se expone la urgente necesidad de que se funde un convento de monjas pues en el territorio de las Au-diencias de Los Charcas existiacutea un gran nuacutemero de muchachas que no pudieacutendose casar se hallaban en gran peligro de perderse (Konetzke laquoemigracioacutenraquo 149)

138 Solorzano Pereira Juan de Libro Primero de la Recopilacioacuten de las Ceacutedulas Reales Cartas y Provisiones y Or-denanzas Reales Noticia preliminar de Ricardo Levenne Universidad de Buenos Aires Facultad de Derecho Y Ciencias Sociales Pub del Instituto de Historia del Derecho Argentino Coleccioacuten de Textos y Documentos para la Historia del Derecho Argentino t V Buenos Aires Imp de la Universidad de Buenos Aires 1945 (Li-bro I Ley 10 laquoQue los Espantildeoles puedan casar con Indias y al contrario a su voluntadraquo t2 p 138 citado en Villafantildee 129

156 JUAN FRANCISCO MAURA

Entristece ver coacutemo se manejan las cifras de estas mujeres como si de ganado o de bienes suntuarios se tratase Por otra parte existieron irregularidades como la de pobla-doras espantildeolas que vivieron amancebadas con hombres que ya estaban casados en la peniacutensula Normalmente esto ocurriacutea cuando la estancia del conquistador se prolonga-ba maacutes de lo debido en lugares donde habiacutea pocas espantildeolas Muchas veces nacieron hijos de estas uniones que hicieron auacuten maacutes difiacutecil la situacioacuten para las mujeres que esperaban en Espantildea a un marido que ya no teniacutea ningunas intenciones de volver En los juicios de residencia los documentos acostumbran a citar estos casos ya que era parte de su obligacioacuten castigar las irregularidades extramatrimoniales y salvaguardar las buenas costumbres familiares que con tanto intereacutes se deseaba mantener laquoUn ejemplo nos lo da la isla de Cuba donde en 1532 viven con hombres casados Olalla Hernaacuten-dez Santillana Aranda lsquola Cordobesarsquo Catalina de Leoacuten Catalina Saacutenchez Francisca Hernaacutendez Mayor de Azebedo Juana de Valeros y lsquouna mujer que estaba en casa de Ayalarsquoraquo (Borges 416)

Estos casos no fueron aislados y mucho menos en Cuba centro neuraacutelgico de todo el movimiento de ida y vuelta entre la metroacutepoli y el Nuevo Mundo Estas ocho acusa-ciones por lo tanto no tienen porqueacute considerarse extraordinarias y menos en el lugar maacutes cosmopolita de las Indias en esos momentos al que llegaban flotas a cada momen-to Al parecer existieron casos parecidos en el Riacuteo de la Plata Peruacute y Nueva Espantildea (Ratcliffe 347) El margen legal para que estas mujeres viviesen como quisiesen estuvo limitado por una moral que veiacutea uacutenicamente en el matrimonio o el convento una salida laquovaacutelidaraquo para que fueran aceptadas socialmente Los hombres en iguales circunstan-cias fueron juzgados por una laquomoralraquo mucho maacutes permisiva

La mujer y el cuerpo eclesiaacutestico

Pues iquestquieacuten diablos os traiacutedo aquiacute dijo don Quijote siendo hombre de la iglesia iquestQuieacuten sentildeor replicoacute el caiacutedo laquomi desventuraraquo Pues otra mayor os amenaza dijo don Quijote sino me satisfaceacuteis a todo cuanto primero os pregunteacute (Cervantes Don Quijote )

Otro factor a tener en cuenta en un anaacutelisis sobre la presencia de la mujer en el Nuevo Mundo es el que tiene que ver con la institucioacuten maacutes importante de las que llegaron desde Europa la iglesia catoacutelica Sin aacutenimo de criticar a tan compleja institucioacuten res-ponsable de gran parte de los aconteceres en el Nuevo Mundo vale la pena analizar algunas singularidades Muchos de sus miembros fueron grandes ejemplos de valor e inteligencia a la hora de tratar los maacutes variados y escabrosos asuntos con los que se encontraron los cristianos en la otra orilla durante este periacuteodo Se debe resaltar tam-

157ESPANtildeOLAS DE ULTRAMAR EN LA HISTORIA Y EN LA LITERATURA

bieacuten su caraacutecter medieval en la manera de hacer apostolado y de entender y tratar a los potenciales cristianos Si se tienen en cuenta los privilegios y prerrogativas que algunas de las altas jerarquiacuteas eclesiaacutesticas tuvieron no seriacutea superfluo estimar que un respeta-ble porcentaje de la poblacioacuten de origen laquodudosoraquo muy bien podiacutea venir de la misma iglesia Fueron muchas las viacutectimas y muchas las familias divididas por un padre laquoinvi-sibleraquo Gran parte de los hijos o laquosobrinosraquo de estos sacerdotes pasaron a ocupar cargos similares incluyendo los privilegios que estos cargos llevaban consigo como si se trata-se de cualquier otro oficio gremial transmitido generacionalmente regla tan comuacuten en la Europa medieval Todaviacutea a finales del siglo XIII en Espantildea los derechos de los hijos y nietos de los sacerdotes estaban protegidos por la ley sin que hubiesen podido ser erradicados por las reformas gregorianas (Ratcliffe 347)139

Las letras espantildeolas ya se haciacutean eco de estos lances amorosos entre representantes de la Iglesia y ciertas damas del lugar desde los tiempos del poeta riojano Gonzalo de Berceo En su obra maacutes conocida Los milagros de Nuestra Sentildeora Berceo describe con un realismo ingenuo y sencillo relatos de humor y de humanismo sobre aquellos hombres de carne y hueso que eran perdonados por la intercesioacuten de la Virgen Mariacutea Juan Ruiz por su lado haraacute de su Libro de buen amor la obra maacutes representativa en este sentido Seriacutea prolijo recordar la actuacioacuten de la Iglesia durante diversos periacuteodos de la Edad Media no soacutelo en Espantildea sino en toda Europa En la Espantildea musulmana del siglo XII concretamente en Sevilla el comportamiento de los representantes de la iglesia cristia-na (mozaacuterabe) en territorio islaacutemico es duramente criticado por el sevillano Ibn Abdun Este precioso documento muestra el estricto control y falta de confianza que existiacutea sobre la mujer prohibieacutendolas que entrasen en las laquoabominablesraquo iglesias cristianas

porque los cleacuterigos [cristianos] son libertinos fornicadores y sodomi-tas Asimismo debe prohibirse a las mujeres francas que entren en la iglesia maacutes que en diacuteas de funcioacuten o fiesta porque alliacute comen beben y fornican con los cleacuterigos y no hay uno de ellos que no tenga dos o maacutes de estas mujeres con que acostarse Han tomado esta costumbre por haber declarado iliacutecito lo liacutecito y viceversa Convendriacutea pues mandar a los cleacuterigos que se casasen como ocurre en Oriente y que si quie-ren lo hagan (Leacutevi-Provenccedilal 150)

Pese a existir una convivencia paciacutefica durante gran parte de la Edad Media entre los tres credos monoteiacutestas de Espantildea (cristianos musulmanes y judiacuteos) esto no suponiacutea que no existiese desprecio y desconfianza entre estos grupos religiosos Dice Abdun resaltando el peligro que suponiacutea que una mujer entrase en casa de un cleacuterigo cristiano de vida ceacutelibe

No debe tolerarse que haya mujer sea vieja o no en casa de un cleacuterigo mientras eacuteste rehuacutese casarse Obliacutegueseles ademaacutes a circuncidarse co-mo les obligoacute al-Mutadid pues si a lo que dicen siguen el ejemplo de Jesuacutes (iexclDios les bendiga y salve) Jesuacutes se circuncidoacute y precisamente ellos que han abandonado esta praacutectica tienen una fiesta que celebran solemnemente el diacutea de su circuncisioacuten (Leacutevi-Provenccedilal 150-151)

139 Valdriacutea la pena ver si han cambiado mucho las cosas desde hace quinientos antildeos a esta parte o si in-cluso la iglesia moderna ha retrocedido en tolerancia en cuanto a las relaciones sexuales de los representantes de la Iglesia

158 JUAN FRANCISCO MAURA

El historiador argentino Germaacuten Arciniegas recoge un pasaje ilustrativo de lo men-cionado anteriormente pero trasladado al ambiente de la colonia diciendo que incluso en poblaciones pequentildeas como Santa Fe con poco maacutes de un convento y una ermita la fragilidad de la carne enredaba a frailes soldados y virreyes por igual laquoEl buen So-liacutes que murioacute en olor de santidad con la cabeza reclinada sobre un par de ladrillos y en saya de franciscano cruzaba en las noches el solar de su palacio para ir a besar a la Marichuelaraquo (118-19)

Arciniegas recoge tambieacuten un suceso aparecido en el diario de Lima en 1667 que no tuvo que ser extraordinario durante los primeros antildeos de la colonia laquoEl fraile carmelita mdashGrande hereje y siendo sacerdote deciacutea misa gran perro lujurioso deshonesto que relatando sus maldades dijo que en cierta ciudad habiacutea conocido carnalmente a maacutes de trescientas y sesenta mujeres y en un convento de monjas habiacutea cometido muchos sacrilegios Este lo trujeron preso de Buenos Aires por Chileraquo (119)

Las controversias de la iglesia moderna sobre las relaciones que los eclesiaacutesticos de-ben tener con el sexo femenino parece que no han encontrado todaviacutea respuesta Sigue existiendo miedo y recelo a que la mujer comparta no soacutelo poder en la jerarquiacutea de la iglesiacutea sino en la vida privada de los miembros de la institucioacuten En la Nueva Espantildea el primer obispo de Meacutexico Juan de Zumaacuterraga viendo en la mujer un ser de tentacioacuten irresistible prohibioacute terminantemente la presencia de eacutestas en su casa Ni siquiera para su limpieza y aseo El franciscano Juan de Torquemada se refiere a este comportamien-to como una de las virtudes del popular obispo

Fue este benditiacutesimo prelado muy amigo de la virtud y de virtuosos y aceacuterrimo reprehendedor de vicios y viciosos y tan enemigo de la ociosidad que no permitiriacutea que alguno de su casa estuviese ocioso fue amiciacutesimo de la limpieza por lo cual jamaacutes consintioacute que mujer alguna entrase en su casa aunque fuese necesaria al servicio de ella ni nunca consintioacute que por alguna ocasioacuten subiese mujer a lo alto y aposentos de ella antes lo teniacutea todo cerrado como un monasterio porque sabiacutea (como quien tambieacuten sabiacutea) que la ocasioacuten suele derribar los maacutes fuertes y robustos corazones (450 lib 20 cap 31)

No fueron uacutenicamente miembros de la iglesia catoacutelica los que valoraron la lucha con-tra la tentacioacuten siguiendo al pie de la letra el crudeliacutesimo refraacuten laquoentre santa y santo pared de cal y cantoraquo Se tienen algunas noticias de la vida social de los primeros tiem-pos de la colonia En estos documentos se puede observar coacutemo no distaban mucho las oacuterdenes que se dictaban en la metroacutepoli y las que se llevaban a cabo en la Nueva Espantildea La vida social tanto de damas como de algunos miembros de la iglesia de las colonias era maacutes laquorelajadaraquo de lo que las normas permitiacutean Gracias a la informacioacuten ofrecida por Manuel Romero de Terreros disponemos de los nombres de las primeras virreinas

Las esposas de los primeros cinco Virreyes Don Antonio de Mendoza Don Luis de Velasco Don Gastoacuten de Peralta Don Martiacuten Enriacutequez de Almanza y Don Lorenzo Suaacuterez de Mendoza Conde de la Coruntildea fueron respectivamente Dontildea Caterina de Vargas Dontildea Ana de Cas-tilla y Mendoza hija de Don Diego de Castilla Sentildeor de Gor y Caba-

159ESPANtildeOLAS DE ULTRAMAR EN LA HISTORIA Y EN LA LITERATURA

llerizo de Carlos V Dontildea Leonor de Vieo Dontildea Mariacutea Manrique hija del Marqueacutes de Aguilar y Dontildea Catalina de la Cerda hija del segundo Duque de Medinaceli (Romero 2)

Existen noticias concretas de la seacuteptima virreina de la Nueva Espantildea (1586) dontildea Blanca de Velasco marquesa de Villamanrique En ellas destaca lo anteriormente men-cionado sobre la falta de tolerancia existente en aquellos tiempos difiacutecilmente com-prensible si no fuera por fragmentos esporaacutedicos conservados sobre la vida colonial en la Nueva Espantildea En la siguiente Relacioacuten hecha por autores anoacutenimos sobre la visita que hizo Fray Alonso Ponce Comisario General de la Orden Seraacutefica a las provincias de la Nueva Espantildea se mencionan las eneacutergicas medidas que con los miembros de su orden en su opinioacuten de moral laquomuy relajadaraquo tomoacute este religioso Tambieacuten aparecen mencionadas sus relaciones con la Virreina

Captoacutese ademaacutes la enemistad del gobernante y de la Virreina Dontildea Blanca de Velasco hija del cuarto Conde de Nieva sentildeora seguacuten pare-ce de conducta ligera y caraacutecter maacutes que dominante laquoPor este mismo tiempo (septiembre de 1586) fueron el Virey y la Vireyna a holgarse y recrearse en la cibdad de Xochimilco Posoacute con toda su casa dentro de nuestro convento en un dormitorio deacutel y detuacutevose alliacute siete u ocho diacuteas en que los indios les hicieron grandes fiestas aunque les costaron caras porque en una dellas murieron dos o tres dellos con un tiro que se disparoacute y reventoacute y al principal indio de aquella cibdad hirieron muy malraquo (Romero 3-4)

A pesar del riacutegido control eclesiaacutestico y civil que habiacutea en la Nueva Espantildea existieron tambieacuten pareacutentesis en los que incluso miembros de la iglesia y mujeres mdashhumanos al fin y al cabomdash pudieron disfrutar de algunos momentos de regocijo y alegriacutea Con-tinuando con la cita anterior el mismo autor se queja del laquoexcesoraquo de libertad en los frailes que se suponiacutea que teniacutean que profesar una extremada pobreza y no digamos castidad En primer lugar se describen pormenorizadamente la abundancia en el tipo y cantidad de comida de toda clase dulces y vino que se consumieron con largueza y generosidad durante aquellas fiestas Pero lo que maacutes indigna al autor (o autores) fue que llegasen a entrar mujeres en el convento

y aunque todo esto es malo delante de Dios y delante de los hom-bres lo que maacutes mal parecioacute y de que todo el mundo tuvo que mur-murar fueacute la demasiada libertad rotura y disolucioacuten que hubo en en-trar y estar muy de propoacutesito mujeres no soacutelo la Vireyna y las suyas sino otras muchas dentro del dicho convento y andar por las celdas como si fuese cosa profana y como si no hubiera breve apostoacutelico que soacute graves penas y censuras prohibe estas entradas y como si a los frai-les no los comprendiera el dicho breve por admitirlas y no estuviera asiacute declarado y mandado por nuestros estatutos generales de Toledo (Romero 4-5)

La preocupacioacuten por las laquotentaciones de la carneraquo fuera del matrimonio siempre es-tuvo en la mente de los religiosos espantildeoles asiacute como de otras nacionalidades y reli-

160 JUAN FRANCISCO MAURA

giones que intentaban vanamente erradicar algo tan intriacutenseco al ser humano como a cualquier otra especie animal Esta preocupacioacuten se acentuoacute mucho maacutes en el Nuevo Mundo donde muchas sociedades tribales no veiacutean a la mujer como parte integrante de su propiedad privada La razoacuten es obviamente socioloacutegica y ha existido desde el principio de los tiempos en las civilizaciones maacutes primitivas laquoNo desearaacutes a la mujer del proacutejimoraquo El quebrantar este precepto equivaldriacutea a desestabilizar desde su base a la sociedad judeo-cristiana fundamentada en la familia Las penas aplicadas en estas transgresiones seraacuten lo suficientemente severas como para marginar socialmente mdashen el mejor de los casosmdash a aquellos que las pongan en praacutectica Siendo la mujer la encar-gada por la naturaleza de trasmitir la descendencia de la especie su libertad sexual se veraacute limitada por el peligro de quedar embarazada cada vez que ignore tal elemental precepto140

Primeras escritoras del Nuevo Mundo

Contra cuerdos y contra locos estaacute obligado cualquier caballero andante a volver por la honra de las mujeres cualesquiera que sean Cuanto maacutes por las reinas de tan alta guisa y pro como fue la reina Madaacutesima a quien yo tengo particular aficioacuten por sus buenas partes porque fuera de haber sido fermosa ademaacutes fue muy prudente y muy sufrida en sus calamidades que las tuvo muchas (Cervantes Don Quijote)

Fueron varias las escritoras que durante los siglos XVI y XVII tuvieron una relacioacuten di-recta o indirecta con el Nuevo Mundo Muchas de ellas eligieron la vida monaacutestica mdashen algunos casos como refugio huyendo de sus maridosmdash uacutenica salida en una estructura social en donde no eran muchas las opciones especialmente en una eacutepoca donde el fac-tor religioso pesaba casi tanto como el econoacutemico pero sobre todo para dedicarse a una vida espiritual difiacutecilmente alcanzable en otras circunstancias Mariloacute Vigil apunta que las monjas que lo eran por su propia voluntad ademaacutes de tener inquietudes religiosas tambieacuten las teniacutean intelectuales como es el caso de la escritora miacutestica espantildeola Santa Teresa de Jesuacutes (1515-1582) que ademaacutes de tener una de las vidas maacutes interesantes que se conozcan supo sacar tiempo para escribir las maacutes bellas manifestaciones de la poesiacutea liacuterica y sobre todo de la prosa castellana (Vigil 237-38) Cada una de estas mujeres de-dicadas a la vida literaria y espiritual de su tiempo se merece muchiacutesimo maacutes espacio del que se les pueda ofrecer en estas pocas liacuteneas No obstante con estas pasajeras men-

140 Aunque afortunadamente las cosas han cambiado para la mujer no se debe dejar de mencionar la can-tidad de abusos sexuales de la que es viacutectima en la sociedad moderna

161ESPANtildeOLAS DE ULTRAMAR EN LA HISTORIA Y EN LA LITERATURA

ciones se espera al menos incluirlas y poder despertar el suficiente intereacutes para que sus vidas y sus obras no sigan sumergidas en las simas del olvido Para que estas mujeres de la iglesia pudiesen satisfacer su curiosidad cognoscitiva era necesario romper todas aquellas barreras que supusiesen un estorbo o una restriccioacuten a la hora de investigar consultar o hablar con cualquier persona religiosa de cualquier orden o secular ya fue-se obispo o cleacuterigo Las posiciones intelectuales entre las diferentes oacuterdenes religiosas fueron muy dispares como bien es sabido No eran iguales los planteamientos teoloacute-gicos de los dominicos que los de los franciscanos o los de los carmelitas que los de los agustinos o jesuitas Era necesario por lo tanto tener acceso a estas fuentes de informa-cioacuten para poder constrastar las diferencias y hacer valoraciones propias (Vigil 237-38) El escritor espantildeol Caro Baroja destaca el caraacutecter enciclopeacutedico del catolicismo donde se han integrado corrientes y posturas muy dispares que a traveacutes del diaacutelogo daban cierto espacio al creyente con maacutes curiosidad intelectual para que este pudiese compa-rar y valorar las diferentes opciones que se le ofreciacutean (Vigil 237-38)

Varias de estas mujeres intelectuales fueron hijas de conquistadores que aunque na-cidas en suelo americano seguiacutean expresaacutendose en la lengua de sus padres con no me-nos fuerza que sus contemporaacuteneas peninsulares Es cierto que existieron numerosas escritoras en el Nuevo Mundo durante el siglo XVIII algunas dedicadas incluso al estudio de las matemaacuteticas como la mexicana Dontildea Francisca Gonzaga y Castillo Pero para limitar el presente trabajo a los siglos XVI y XVII uacutenicamente se incluiraacuten ejemplos de estos dos siglos

La peruana Josefa de Alarcoacuten publicoacute en 1648 unas liras dedicadas a las Exequias del Priacutencipe Baltasar Carlos

Cifro en capilla breveEl tribunal de la Magestad maacutes graveEn fe de lo que debeA Carlos que en dos mundos no cabe141

El caso de Sor Jeroacutenima de la Asuncioacuten es muy interesante una mujer que tuvo la oportunidad de viajar a Meacutexico y posteriormente a las Filipinas para cumplir con las mi-siones que le habiacutean sido encomendadas por su orden Nacida en Toledo en 1555 en el seno de una noble y acaudalada familia estuvo destinada a recorrer el mundo ofrecien-do sus servicios a todos los necesitados distinguieacutendose por su ardiente caridad laquovien-do que los galeotes eran tratados con dureza excesiva sobre todo cuando los llevaban de un pueblo a otro procuroacute aliviar las penas de aquellos desgraciados y lo consiguioacute en parteraquo (Serrano y Sanz 268 65) Hija del licenciado e ilustre jurista Pedro Garciacutea Yaacute-ntildeez y de dontildea Catalina de la Fuente ingresoacute contra su voluntad en el monasterio de las Clarisas de Santa Isabel de los Reyes (Toledo) el 5 de agosto de 1570 (Trevintildeo 46) hay que decir que eacutesta no seraacute la uacutenica voluntad contra la que tuvo que luchar

Sor Jeroacutenima se embarcoacute para Meacutexico y de alliacute partioacute hacia Manila junto con siete compantildeeras en el famoso laquoGaleoacuten de Manilaraquo que saliacutea anualmente del puerto mexi-cano de Acapulco Su viaje a las Filipinas duroacute un antildeo y tres meses desde su salida de Espantildea tiempo en el que demostroacute un gran valor y determinacioacuten por el soacutelo hecho de

141 Manuel Serrano y Sanz Apuntes para una biblioteca de escritoras espantildeolas desde el antildeo 1401 al 1833 vols 268 269 270 271 Biblioteca de Autores Espantildeoles (Madrid Atlas 1975) 268 19

162 JUAN FRANCISCO MAURA

embarcarse en tan precarias naves Fue la primera misionera de Oceaniacutea muriendo en Manila en 1621 Alliacute fundoacute el monasterio de Santa Clara que perviviriacutea hasta ser bom-bardeado en la Segunda Guerra Mundial (Trevintildeo 47) Escribioacute su Vida donde trata de la fundacioacuten del convento y de todas las tribulaciones mdashllegoacute a ser excomulgadamdash y satisfacciones que una vida dedicada a una causa justa proporciona Tambieacuten escribioacute una obra de caraacutecter filosoacutefico-teoloacutegico titulada Carta de marear en el mar del mundo nombre alegoacuterico que da cuenta de la enorme distancia recorrida a traveacutes del laquomar del espiacuterituraquo por sor Jeroacutenima He aquiacute algunos de sus versos de caraacutecter religioso

Vuestra soy para vos naciacuteiquestQueacute mandaacuteis hacer de miacute Inaccesible grandezaEterna Sabiduriacuteay bondad del alma miacuteaDios un ser poder y Altezamirad la suma pobrezade eacutesta que se ofrece aquiacuteiquestQueacute mandaacuteis hacer de miacute (Serrano y Sanz 268 66)

Ya en Meacutexico tenemos otro ejemplo de una mujer dedicada por completo a Dios y al estudio y composicioacuten de obras de caraacutecter teoloacutegico Dontildea Ana Mariacutea del Costa-do de Cristo nacida en la ciudad de Tlaxcala hacia el antildeo 1650 Tomoacute la orden de San Francisco para consagrarse a las labores de su orden y a la escritura Se dice que con los escritos de Dontildea Ana Mariacutea se podriacutean formar veinte tomos (Serrano y Sanz 268 282) Estas son algunas de sus obras Vida y muerte de Jesucristo Nuestro Sentildeor Vida del Seraacutefico Padre San Francisco de Asiacutes Vida de la iacutenclita Virgen Santa Clara Vida del sutiliacutesimo doctor Juan Duns Escoto

Pero no todas las monjas tuvieron vidas tan dedicadas al estudio y la oracioacuten Loacutegica-mente entre un nuacutemero tan grande de mujeres existioacute de todo y seriacutea un error pensar que todos los conventos femeninos estaban integrados por laquocaacutendidas palomasraquo Una monja en el siglo XVI y XVII teniacutea mucha maacutes fuerza que una mujer ordinaria ya que actuaban en grupo y la entrada a los recintos donde viviacutean estaba permitida solo a mu-jeres Esta situacioacuten las haciacutea mucho maacutes fuertes a todos los niveles que una mujer sola protegida uacutenicamente por su familia laquoLas monjas durante los siglos XVI y XVII lucharon por eludir la clausura y por zafarse del control que los frailes de las secciones masculi-nas de sus congregaciones ejerciacutean sobre ellasraquo (Vigil 230) Soacutelo un antildeo maacutes tarde que dontildea Ana Mariacutea del Costado de Cristo en 1651 y a 12 leguas de Meacutexico nacioacute la sin par Sor Juana Ineacutes de la Cruz hija de don Pedro Manuel de Asbaje natural de Vergara (Vizcaya) y de Dontildea Isabel Ramiacuterez de Santillana hija de espantildeoles (Serrano y Sanz 268 289) Por ser sin lugar a dudas la poeta maacutes importante de su tiempo y probable-mente la maacutes conocida del mundo hispano no profundizaremos en ella Su obra es un canto a la inteligencia y el exponente maacutes destacado de la literatura barroca americana tanto en prosa como en verso Destacareacute simplemente que Sor Juana Ineacutes pese a vivir en un sociedad donde no eran excesivas las libertades concedidas a las mujeres tuvo el caraacutecter y la determinacioacuten de dejarnos las maacutes bellas poesiacuteas amorosas que si bien estuvieron enmarcadas en un ambiente religioso como era de esperar por su condicioacuten

163ESPANtildeOLAS DE ULTRAMAR EN LA HISTORIA Y EN LA LITERATURA

pudieron transcender como unas de las maacutes bellas manifestaciones literarias que hoy en diacutea se conservan Fue su agudeza mental sensibilidad y cultura tal que no fueron suficientes los soacutelidos muros del convento para contener el genio de tan extraordinaria mujer Recordemos sus conocidiacutesimos versos en defensa de las mujeres

Hombres necios que acusaacuteisa la mujer sin razoacutensin ver que sois la ocasioacutende lo mismo que culpaacuteis142

Las metaacuteforas y la delicadeza que emplea en rebatir a su obispo en su laquoRespuesta a sor Filotea de la Cruzraquo no son solamente el epiacutetome del feminismo de su tiempo sino una de las maacutes brillantes manifestaciones del barroco hispano Poesiacutea teatro ensayo y un conocimiento extraordinario de las ciencias claacutesicas de su tiempo hacen de esta mujer un ejemplo extraordinario de las letras universales Ya son cientos los artiacuteculos y libros que se han escrito sobre Sor Juana y no dejan de aparecer tesis doctorales sobre los maacutes diversos temas conectados con la citada autora143 Como nos dice Stephanie Merrim en su documentada obra Early Modern Womenrsquos Writing and Sor Juana Ineacutes de la Cruz

She wrote and published on secular themes as atypical for a nun as human love Her remarkably extensive writings essayed and reenacted most of the (male) poetic dramatic theological and even philosophi-cal discourses of her times in the metropolis making her works a com-pendium of baroque culture in its diversity and syncretism Sor Juana self-creation as a learned women effectively toppled many of the walls in which she was materially enclosed and positioned her within the dynamic world of early modern European culture (xii)

No se debe dejar de mencionar a otras escritoras novohispanas de la eacutepoca que aun-que no fueron tan proliacuteficas y relevantes como Juana Ineacutes de la Cruz dejaron testimo-nio de algunos acontecimientos que tienen intereacutes socioloacutegico o testimonial Este es el caso de Dontildea Mariacutea Estrada Medinilla de igual nombre y apellido que la mujer que acompantildeoacute a las tropas de Corteacutes en su primera entrada a Meacutexico Natural de Meacutexico publicoacute toda su obra a mediados del siglo XVII concentraacutendose principalmente en la lle-gada del Marqueacutes de Villena virrey y capitaacuten general de la Nueva Espantildea a la ciudad de Meacutexico en el antildeo 1640 Escrita en octavas reales la obra trata de las fiestas de toros y cantildeas con que se obsequioacute al citado virrey Fue impresa en Meacutexico en 1641 (Serrano y Sanz 269 402)

Mucho maacutes importante para el presente libro es Dontildea Isabel de Guevara que escribioacute en 1556 la carta en que se expone la ayuda que ofrecieron las mujeres en el descubri-miento y conquista del Riacuteo de la Plata No cabe la menor duda de que esta carta es uno

142 Para una mejor comprensioacuten del caraacutecter de esta excepcional mujer veacutease entre los numeros trabajos publicados Fredo Arias de la Canal Intento de psicoanaacutelisis de Juana Ineacutes y otros ensayos sorjuanistas (Meacutexico Frente de Afirmacioacuten Hispanista 1972) 47

143 Veacuteanse entre otros trabajos Octavio Paz Sor Juana Ineacutes de la Cruz o las trampas de la fe Georgina Sabat de Rivers En busca de Sor Juana Margo Glantz Sor Juana la comparacioacuten y la hipeacuterbole Gerard C Flynn Sor Juana Ineacutes de la Cruz Stephanie Merrim Feminist perspectives on Sor Juana Ineacutes de la Cruz Pamela Kirk Sor Juana Ineacutes de la Cruz religion art and feminism

164 JUAN FRANCISCO MAURA

de los documentos maacutes importantes con que contamos en relacioacuten a la aportacioacuten fe-menina en el proceso de la conquista de Ameacuterica Su importancia viene dada por varios factores Primero es uno de los primeros testimonios mdashsi no el primeromdash en donde se expone abiertamente la indispensable colaboracioacuten de las mujeres en el descubrimien-to y conquista de tierras en el Nuevo Mundo laquoQue si no fuera por ellas todos fueran acabadosraquo En segundo lugar la informacioacuten vertida en estas liacuteneas presenta en parte la manera de pensar de una mujer espantildeola en tales circunstancias Extraordinario tes-timonio de primera mano que nos da una idea de lo que significoacute en muchos casos el valor y entrega constantes de muchas de estas mujeres que auacuten a riesgo de perder sus vidas no dudaron en luchar al lado de los hombres por una causa que consideraban laquocomuacutenraquo

La relevancia histoacuterica de dicha carta hace que merezca ser transcrita en su totali-dad

Carta de dontildea Isabel de Guevara a la princesa gobernadora dontildea Juana exponiendo los trabajos hechos en el descubrimiento y conquista del Riacuteo de la Plata por las mujeres para ayudar a los hombres y pidiendo repartimiento

para su marido Asuncioacuten 2 de julio de 1556

Muy alta y muy poderosa sentildeora

A esta provincia del Riacuteo de la Plata con el primer gobernador de ella don Pedro de Mendoza hemos venido ciertas mujeres entre las cuales ha querido mi ventura que fuese yo la una y como la armada llegase al puerto de Buenos Aires con mil quinientos hombres y les faltase el bastimento fue tamantildea el hambre que a cabo de tres meses murie-ran los mil esta hambre fue tamantildea que ni la de Jerusalem se le puede igualar ni con otra ninguna se puede comparar Vinieron los hombres en tanta flaqueza que todos los trabajos cargaban de las pobres mu-jeres asiacute en lavarles las ropas como en curarles hacerles de comer lo poco que teniacutean limpiarlos hacer centinela rondar los fuegos armar las ballestas cuando algunas veces los indios les veniacutean a dar guerra hasta cometer a poner fuego en los versos y a levantar los soldados los que estaban para ello dar arma por el campo a voces sargentean-do y poniendo en orden los soldados porque en este tiempo como las mujeres nos sustentamos con poca comida no habiacuteamos caiacutedo en tanta flaqueza como los hombres Bien creeraacute V A que fue tanta la so-licitud que tuvieron que si no fuera por ellas todos fueran acabados y si no fuera por la honra de los hombres muchas maacutes cosas escribiera con verdad y los diera a ellos por testigos Esta relacioacuten bien creo que la escribiraacuten a V A maacutes largamente y por eso cesareacute Pasada esta tan peligrosa turbunada determinaron subir el riacuteo arriba asiacute flacos como estaban y en entrada de invierno en dos bergantines los pocos que quedaron vivos y las fatigadas mujeres los curaban y los miraban y les guisaban la comida trayendo la lentildea a cuestas fuera del naviacuteo y animaacutendolos con palabras varoniles que no se dejasen morir que presto dariacutean en tierra de comida metieacutendolos a cuestas en los

165ESPANtildeOLAS DE ULTRAMAR EN LA HISTORIA Y EN LA LITERATURA

bergantines con tanto amor como si fueran sus propios hijos Y como llegamos a una generacioacuten de indios que se llaman tinbues sentildeores de mucho pescado de nuevo los serviacuteamos en buscarles diversos modos de guisados porque no les diese en rostro el pescado a causa de que lo comiacutean sin pan y estaban muy flacos Despueacutes determinaron subir el Paranaacute arriba en demanda de bastimento en el cual viaje pasaron tanto trabajo las desdichadas mujeres milagrosamente quiso Dios que viviesen por ver que en ellas estaba la vida de ellos porque todos los servicios del naviacuteo los tomaban ellas tan a pechos que se teniacutea por afrentada la que menos haciacutea que otra sirviendo de marear la vela y gobernar el naviacuteo y sondar de proa y tomar el remo al soldado que no podiacutea bogar y escotar144 el naviacuteo y poniendo por delante a los soldados que no se desanimasen que para los hombres eran los trabajos verdad es que a estas cosas ellas no eran apremiadas ni las haciacutean de obliga-cioacuten ni las obligaba si solamente la caridad Asiacute llegaron a esta ciudad de la Asuncioacuten que aunque ahora estaacute muy feacutertil de bastimentos en-tonces estaba de ellos muy necesitada que fue necesario que las muje-res volviesen de nuevo a sus trabajos haciendo rosas con sus propias manos rosando y carpiendo y sembrando y recogiendo el bastimento sin ayuda de nadie hasta tanto que los soldados guarecieron de sus fla-quezas y comenzaron a sentildeorear la tierra y adquirir indios e indias de su servicio hasta ponerse en el estado en que ahora estaacute la tierra He querido escribir y traer a la memoria de V A para hacerle saber la ingratitud que conmigo se ha usado en esta tierra porque al presente se repartioacute por la mayor parte de los que hay en ella asiacute de los anti-guos como de los modernos sin que de miacute y de mis trabajos se tuviese ninguna memoria y me dejaron de fuera sin me dar indio ni ninguacuten geacutenero de servicio Mucho me quisiera hallar libre para me ir a presen-tar delante de VA con los servicios que a SM he hecho y los agravios que ahora se me hacen mas no estaacute en mi mano porque estoy casada con un caballero de Sevilla que se llama Pedro de Esquivel que por servir a SM ha sido causa que mis trabajos quedasen tan olvidados y se me renovasen de nuevo porque tres veces le saqueacute el cuchillo de la garganta como allaacute VA sabraacute A que suplico mande me sea dado mi repartimiento perpetuo y en gratificacioacuten de mis servicios [en el origi-nal del AHN Diversos doc 141 dice ademaacutes mande que sea proveydo mi marido de alguacuten cargo conforme a la calidad de su persona pues el de su parte por sus servicios lo merece] lo merece Nuestro sentildeor acre-ciente su Real vida y estado por muy largos antildeos De esta ciudad de la Asuncioacuten y de julio 2 1556 antildeosServidora de V A que sus Reales manos besa

Dontildea Isabel Guevara

144 Sacar agua de un riacuteo acequia o presa

166 JUAN FRANCISCO MAURA

Sobremdash A la muy alta y muy poderosa sentildeora Princesa dontildea Joana Gobernadora de los reinos de Espantildea etc ndash En su Consejo de Indias (Isabel de Guevara 619-21)

Iroacutenicamente la carta teniacutea que llegar a manos de la desdichada heredera del trono de Castilla e hija de los Reyes Catoacutelicos Juana laquola Locaraquo que habiacutea muerto el antildeo an-terior Son profeacuteticas las palabras de esta mujer no soacutelo porque sus hechos personales quedasen en el olvido sino porque incluso se ha borrado la historia de las mujeres en el Nuevo Mundo negando su presencia Por lo menos Isabel Guevara tuvo acceso a una pluma iquestCuaacutentas seriacutean las que ni siquiera sabriacutean escribir

Otra contemporaacutenea fue dontildea Leonor de Iciz que vivioacute durante la segunda mitad del siglo XVI Interesa sobre todo por los sonetos que escribioacute en elogio de Ercilla soldado que participoacute en la conquista de Chile y que se inmortalizoacute con su obra La Araucana (Serrano y Sanz 269 534) Lo mismo hizo Dontildea Bernarda Lintildeaacuten en 1610 autora de otro soneto en memoria del capitaacuten Gaspar Peacuterez de Villagraacute que participoacute en la conquista de Nuevo Meacutexico (Serrano y Sanz 270 14) Los escritos de estas mujeres tratan de de dos de las eacutepicas maacutes dramaacuteticas de la conquista

En el Peruacute y en pleno siglo XVII aparece otra fundadora de conventos Sor Bernardina de Jesuacutes que ademaacutes fue comparada con Santa Teresa por la semejanza de sus laquocartasraquo con las de la santa de Avila Fue fundadora del convento de Tacunga en Quito maacutes tarde destruiacutedo por un terremoto Dice Serrano y Sanz con respecto a su biografiacutea un tanto legendaria que fue carmelita descalza de Lima y hermana de Dontildea Mariacutea Benavides y Esquivel abuela de D Pedro de Peralta Barnuevo (Serrano y Sanz 269 553) Dicen que esta santa se alimentoacute durante treinta antildeos con laquochochos y caacutescaras de naranja hecho tan raro como increiacuteble Cuando fallecioacute reparaban las monjas en ponerle una vara de azucenas porque habiacutea sido casada y aquellas flores aparecieron milagrosamente sobre el cadaacuteverraquo (Serrano y Sanz 269 553)

Otra limentildea del primer cuarto del siglo XVII con reputacioacuten de santa fue Dontildea Luisa Melgarejo En este caso no se trata de una religiosa de oficio sino de la mujer del doctor Juan de Soto La uacutenica diferencia es que dontildea Luisa al parecer teniacutea laquovisiones y reve-lacionesraquo lo que debioacute poner nervioso a maacutes de un miembro del tribunal del laquoSanto Oficioraquo que consideraron sus escritos laquoculpadosraquo De su papel de laquosantaraquo pasa por lo tanto al de laquoposesaraquo o laquoendemoniadaraquo El inquisidor de Lima Gaitaacuten escribioacute un infor-me donde a traveacutes de la opinioacuten puacuteblica y de otras averiguaciones se deciacutea que dontildea Luisa Melgarejo laquomujer santaraquo sabiacutea cuando las almas de los difuntos saliacutean del Purga-torio El diacutea 14 de noviembre de 1623 se decidioacute tomar posesioacuten de todos los cuadernos en los que habiacutea escrito las experiencias de todos sus laquoarrobos suspensiones extasis y revelacionesraquo Estos cuadernos una vez recogidos presentaron toda una serie de al-teraciones borrones adiciones enmiendas incluso diferente letra por lo que despueacutes de haber sido examinados resultaron culpables145 Excelente imaginacioacuten debioacute tener dontildea Luisa Melgarejo la suficiente al parecer para convencer a algunos miembros de la iglesia de que en sus escritos laquohabiacutea algoraquo que mereciacutea la pena Estas cosas ocurriacutean en Lima uno de los centros culturales maacutes importantes de la vida social y poliacutetica en la Ameacuterica espantildeola Lima a comienzos del siglo XVII seguacuten el empadronamiento llevado

145 Serrano y Sanz 270 47 Veacutease J T Medina Historia del tribunal del Santo Oficio de la Inquisicioacuten de Lima (1569-1820) (Santiago Imprenta Gutemberg 1887) Tomo II 34-41

167ESPANtildeOLAS DE ULTRAMAR EN LA HISTORIA Y EN LA LITERATURA

a cabo en 1614 por el marqueacutes de Montesclaros era una ciudad de 25000 habitantes de los que 11000 eran espantildeoles El nuacutemero de religiosos y religiosas llegaba a 1720 (Pittaluga 77)

Se sabe que en la Isla de Santo Domingo durante el siglo XVI nacioacute o al menos resi-dioacute una poeta de ceacutelebre apellido en los aconteceres del Nuevo Mundo Dontildea Elvira de Mendoza de la que se conserva un manuscrito en la Real Academia de la Historia laquoCantares miacuteos que estaacuteis rebeladosraquo Eugenio de Salazar hace un elogio de ella como poeta en un Soneto a la ilustre Poeta y Sentildeora Dontildea Elvira de Mendoza moradora en la ciudad de Santo Domingo (Serrano y Sanz 270 53)

Nacida en Burgos sobre el antildeo 1590 dontildea Luisa de Padilla merece un lugar aparte dentro del grupo de mujeres escritoras de su eacutepoca Por su estilo faacutecil y castizo su no-vedad de pensamientos y su rica erudicioacuten recibioacute el siguiente comentario de Manuel Serrano y Sanz laquoPocas figuras hay en nuestra historia literaria femenil que puedan compararse a esta eminente prosista acaso la maacutes notable de cuantas florecieron en Es-pantildea durante el siglo XVIIraquo (Serrano y Sanz 270 95-96) Este comentario y comparacioacuten deberiacutea ampliarse para que tambieacuten incluyese a laquola historia literaria varonilraquo

Dontildea Luisa fue defensora de la labor que la Inquisicioacuten estaba realizando en la laquolim-piezaraquo de mujeres laquosoldados del demonioraquo que existieron en algunas provincias espa-ntildeolas en aquel tiempo Muchas de las mujeres que combinaban la magia con los po-deres curativos fueron condenadas no solamente por hombres de la Inquisicioacuten sino tambieacuten por mujeres de todas las clases sociales como es el caso de Luisa de Padilla condesa de Aranda En su obra Elogios de la verdad e invectiva contra la mentira preveniacutea contra aquellos que practicaban artes en contra de la religioacuten cristiana La magiacutea negra seguacuten Padilla era la causante de que muriesen casi tantas personas como otras causas naturales habieacutendose descubierto hasta seis mil brujas en Vizcaya y Guipuzcua con-fesando una mujer de un pueblo pequentildeo haber matado con su laquomagiaraquo a ochocientas personas (Perry 31) Eran estos laquomales de ojoraquo y maldiciones seguacuten la autora las causas de que se secasen los pechos de las madres lactantes que se separasen las parejas casa-das y que abortasen las embarazadas (Perry 31)

Si se tiene en cuenta que dontildea Luisa estuvo emparentada con la maacutes rancia aristocra-cia de su tiempo o lo que es lo mismo con algunos de aquellos que en cierta manera dirigiacutean los destinos de Espantildea en aquella eacutepoca (Duques de Lerma Duque de Uceda Marqueacutes de Cueacutellar Conde de Santa Gadea Marqueacutes de Belmonte por citar algunos) se comprenderaacute mejor su identificacioacuten con una institucioacuten que en teoriacutea velaba por la salvaguarda de los valores laquoeternosraquo de una Espantildea destinada a ser la campeona del ca-tolicismo durante los siglos XVI y XVII El padre de dontildea Luisa fue don Martiacuten de Padilla y Manrique extraordinario militar que proboacute su valor contra enemigos moriscos ingle-ses holandeses piratas berberiscos y el renegado genoveacutes Muley Faxad Fue veterano de la batalla de Lepanto donde apresoacute a cuatro galeras y acompantildeoacute con su escuadra a la reina Dontildea Margarita de Austria cuando vino de Geacutenova en 1598 laquoHabiacutea obtenido a 24 de julio de 1587 el tiacutetulo de Conde de Santa Gadea y en 1596 el de Capitaacuten General de la Armada del mar Oceacuteanoraquo (Serrano y Sanz 27095-96)

Por otra parte tambieacuten se sabe que dontildea Luisa participoacute directamente y desde tem-prana edad en la praacutectica de algunas actividades intelectuales como la historia y la arqueologiacutea a la vez que dedicaba su tiempo a virtudes cristianas como la caridad y el socorro de los necesitados (Serrano y Sanz 270 97) Resulta mucho maacutes faacutecil compren-

168 JUAN FRANCISCO MAURA

der la postura ideoloacutegica de esta gran mujer si tienen en cuenta ademaacutes de los factores antes mencionados otros tantos de caraacutecter biograacutefico concernientes a su educacioacuten y matrimonio

Otra escritora fue la mexicana dontildea Mariacutea Casilda Pozo natural de Temestla (Meacutexi-co) Nacida en el mes de abril de 1682 dejoacute escrita su biografiacutea en 16 cuadernos el ma-nuscrito original se encuentra en la biblioteca del colegio de San Gregorio de Meacutexico Fue su confesor el jesuiacuteta Domingo Quiroga que fue quieacuten la incitoacute a escribir su obra (Serrano y Sanz 270 137) Sor Juana de San Antonio aparece a principios del siglo XVII formando parte de un grupo de religiosas espantildeolas que fueron a Manila por la ruta de Meacutexico Ademaacutes de distinguirse por sus cualidades personales su obra interesa por ofrecer informacioacuten testimonial y costumbrista acerca de la forma de vestir de chinos y japoneses (Serrano y Sanz 270 225)

Otra monja esta vez ecuatoriana fue Gertrudis de San Ildefonso Nacida en 1652 profesoacute su vocacioacuten en el convento de Santa Cruz de Quito dejando escrita su vida por mandato de su confesor el padre Martiacuten de la Cruz el cual hizo una biografiacutea laquoen tres gruesos voluacutemenesraquo Gertrudis de San Ildefonso murioacute en 1709 (Serrano y Sanz 270 300) en olor de santidad

Sor Mariacutea Ana Agueda de San Ignacio nacioacute el 3 de marzo de 1695 en la dioacutecesis de la puebla de los Angeles en un rancho del lugar de Santiago Tecaliacute (Serrano y Sanz 270300) Esta monja mexicana escribioacute varias obras durante su vida conventual a lo largo de la cual desempentildeoacute el cargo de priora por muchos antildeos Entre sus obras todas de caraacutecter piacuteo y de laquoamor divinoraquo escribioacute un curioso y laquocopiosoraquo tratado de la Leche virginal de la Soberana Madre de Dios El padre Fr Juan de Villa Saacutenchez hace el siguiente comentario al respecto laquoen que hablando primero en sentido natural de los beneficios que debemos a Nuestra Sentildeora pasa a tratar en sentido miacutestico y alegoacuterico enten-diendo en la leche la doctrinaraquo (Serrano y Sanz 270301) Mexicana fue tambieacuten Sor Petronila de San Joseacute que ejercioacute como abadesa del Real monasterio de Jesuacutes Mariacutea de la ciudad de Meacutexico Escribioacute Vidas de varias religiosas ejemplares obra que tiene su im-portancia ya que al parecer laquoDe esta obra se sirvioacute D Carlos de Siguumlenza y Goacutengora para escribir su Parayso Occidental (Meacutexico 1684) seguacuten eacutel mismo declara en el proacutelogo diciendo lsquoa quien si hay algo bueno en esta historia se le debe todorsquoraquo (Serrano y Sanz 270 354) Menos conocida fue su compatriota Sor Luisa de Santa Catalina natural de Xacona laquopueblo situado en las inmediaciones de Zamora (Meacutexico)raquo siendo bautizada en 1682 Escribioacute Cartas espirituales a su confesor el P Juan Loacutepez de Aguado (Serrano y Sanz 270 361-62)146

Todos estos escritos la mayoriacutea de ellos ignorados por el gran puacuteblico tienen la im-portancia de darnos una perspectiva diferente En otras palabras ensentildearnos la maacutes refinada sensibilidad de muchas mujeres que permanecieron y en su mayoriacutea siguen permaneciendo a laquooscurasraquo de una eacutepoca tan rica de la literatura espantildeola como fue el Siglo de Oro Este siglo fue tambieacuten en su dimensioacuten literaria y artiacutestica patrimonio de la mujer

146 Para profundizar en muchas de estas escritoras hispano-americanas la consulta de la Biblioteca Hispano-Americana de Beristain de Souza resulta de capital importancia

169ESPANtildeOLAS DE ULTRAMAR EN LA HISTORIA Y EN LA LITERATURA

Sor Nada ardores divinos de una monja adolescente escritos ineacutedi-tos de una recieacuten profesa del siglo XVI147

iexclQueacute encantadores son tus amores hermana miacutea espo-sa iexclQueacute deliciosos son tus amores maacutes que el vino Y el aroma de tus perfumes es mejor que el de los baacutelsamos Miel virgen destilan tus labios esposa miel y leche hay en tu lengua y el perfume de tus vestidos es como aroma de incienso (Cantar de los Cantares 4 10-11)

Sor Nada llamada asiacute por humildad seguacuten dice el Indice de manuscritos de la Biblio-teca Nacional de Madrid es uno de los ejemplos maacutes desconocidos e interesantes que tenemos de la poesiacutea y prosa amoroso-religiosa del siglo XVII Hasta la fecha nunca se habiacutea publicado su obra e incluso hasta el antildeo 1995 para mi sorpresa no habiacutea copias microfilmadas de sus manuscritos en la Biblioteca Nacional Serrano y Sanz en su libro Apuntes para una Biblioteca de Escritoras Espantildeolas hace una escueta y pasajera mencioacuten de esta mujer y de su obra (68-69) siendo eso todo lo que hasta ahora se sabiacutea de ella Sus escritos consisten en los siguientes manuscritos

1 laquoEn queacute consiste un verdadero amor de Diosraquo 9 hojas uacutetiles en 4ordm letra del siglo XVII Biblioteca Nacional de Espantildea Manuscrito 1295926

2 laquoPintura del Propio Amorraquo laquoPintura del propio Amorraquo 10 hojas uacutetiles en 4ordm letra del siglo XVII Biblioteca Nacional de Espantildea Manuscrito 1295927

3 laquoEsplicacioacuten sobre en queacute consiste la paz del Almaraquo laquoQuartillas aacute un Alma que padece soledad interiorraquo 7 hojas uacutetiles en 4ordm letra del siglo XVII Biblioteca Nacio-nal de Espantildea Manuscrito 1295828

En cuanto a su persona soacutelo se nos dice que laquose encubrioacute con este seudoacutenimo laquoSor Nadaraquo Esta monja desconocida de origen hispanoamericano posee toda la frescura e ingenuidad de una joven apasionada metida por vocacioacuten u obligacioacuten a ejercer la profesioacuten maacutes comuacuten para mujeres de cierta clase social de su tiempo En sus liacuteneas podemos encontrar un misticismo simple incluso en algunos momentos infantil pero a su vez lleno de una fuerza y sensualidad interior poco comuacuten en escritos de este geacute-nero que desborda los liacutemites del laquoamor divinoraquo a traveacutes de los diaacutelogos entre el Alma y el Esposo Sor Nada consigue proyectar su amor a Dios maacutes allaacute de una experiencia romaacutentica Su experiencia es sincera y genuinamente miacutestica trascendiendo la imita-cioacuten o la propia creacioacuten poeacutetica ficcionalizada (Hatzfeld 30) Algunos pasajes son de un

147 Veacutease mi artiacuteculo Sor Nada ardores divinos de una monja adolescente escritos ineacuteditos de una monja profesa del siglo XVIIraquo Espeacuteculo Revista de estudios literarios 26 (2004) 1-10 Universidad Complutense de Madrid http wwwucmesinfoespeculonumero26sornadahtml

170 JUAN FRANCISCO MAURA

alto contenido eroacutetico con sustantivos y metaacuteforas que recuerdan la maacutes iacutentima unioacuten amorosa en unos casos y el tierno amor maternal en otros

[T]e miro Jesus mio desnudo a las inclemencias del tiempo y ardien-do en puro fuego de Amor por la salud de las Almas y me ensentildeas a que te ame con todo mi corason y puresa de espiritu No atendiendo ni buscando umanos intereses ni a solisitar consuelos ni regalos espi-rituales que suelen empantildear la puresa del noble corason No mi Jesus amable pues antes me ensentildeaste tu puro Amor que desnudo sean [sic] de encaminar mis passos desde el pesebre asta la cuna en donde te miro tan desnudo como el pesebre y todo Sentildeor por mi Amor (Mss 12959 26 hoja 1 v)

El manuscrito (12959 27) de la mencionada serie de tres contiene algunas correccio-nes quizaacute hechas por el confesor o quizaacute por ella misma cuando se dirige con excesiva familiaridad y arrebatado fervor a su Amado148 He escogido el manuscrito (12959 Caja 28) en primer lugar por ser el ejemplo maacutes representativo de su poesiacutea y prosa En este manuscrito encontramos de forma maacutes directa que alegoacuterica toda la frescura de un diaacutelogo entre Jesuacutes y el alma que raya como diriacutea Cervantes laquoa la llana y sin rodeosraquo (667 lib 2 cap 38) con el doloroso y a veces desesperado deseo de la entrega y la unioacuten final con el Amado La ortografiacutea no ha sido corregida respetaacutendose el texto ori-ginal149 Veamos el siguiente fragmento

Mira que te amo con Amor de padre y con Amor de esposo el mas fino y puro enamorado que no tan solo me presio de darte mi mano sino tambien todo mi cuerpo y sangre para que con mi pan de vida te sustentes y te regales a tus anchuras y que con mi propio espiritu vivas en paz como tu lo deseas y que mis amores sean unico alivio en tus trabajos en esta mortal vida pues si esto es asi y sabes que muero por darte vida dime esposa mia de que te fatigas Dame querida tus bras-sos y dime si me amas como yo te amo (Hoja 4)

148 La antologiacutea de Promis ha procurado insertar entre los textos antoloacutegicos algunos que se refieren a la es-critura de mujeres fundamentalmente de aquellos generados en el interior de los espacios conventuales Estos textos se fundan como laquohistorias de vidasraquo y responden casi siempre a los requerimientos de los confesores de las monjas coloniales En este sentido resulta valiosiacutesima la incorporacioacuten de la llamada Relacioacuten autobiograacute-fica de Sor Ursula Suaacuterez como una muestra significativa de la escritura monjil entendida en esta eacutepoca (como tambieacuten en la tradicioacuten europea medieval) inserta en las denominadas laquolabores de manoraquo de las religiosas ya que el texto escrito por mandato se convertiacutea en una suerte de entramado o tejido linguumliacutestico es decir en un nuevo bordado que la mayor parte de las veces el confesor convertido en censor iba haciendo tachando y enmendando En la antologiacutea Promis agrega un texto de Sor Tadea Garciacutea de la Huerta titulado Relacioacuten de la inundacioacuten que hizo el riacuteo Mapocho de la ciudad de Santiago de Chile en el monasterio de Carmelitas titular de San Rafael el diacutea 16 de junio de 1783 se trata de un poema tipo romance escrito en versos octosilaacutebicos y que da cuenta de lo sucedido ese diacutea en el convento (Resentildea de la literatura del reino de Chile de Joseacute Promis Eddie Morales Pintildea httpwwwupaclpublicaciones2002literatura_promishtm)

149 Son frecuentes las faltas ortograacuteficas Una de ellas es el uso constante del seseo La ausencia de acentua-cioacuten y puntuacioacuten exceptuando alguacuten punto o coma arbitrario no seguido casi nunca de mayuacutescula inicial lo mismo que el uso igualmente aribitrario de la h o de b v r q g j m n x etc No olvidemos de la misma forma la laxitud linguumliacutestica existente en el siglo XVII (no sabemos a queacute parte de eacuteste pertenece el manuscrito) asiacute como la joven edad de la monja

171ESPANtildeOLAS DE ULTRAMAR EN LA HISTORIA Y EN LA LITERATURA

Los versos del presente manuscrito poseen la misma fuerza que tiene su prosa Con una estructura estroacutefica indefinida estaacuten aparentemente corregidos por alguien que tu-vo la oportunidad de conocer personalmente a la autora Muy probablemente se trate del padre al que hace referencia al principio del primer manuscrito laquoMandame el Pd que le declare en que consiste un verdadero amor a Diosraquo a continuacioacuten continuacutea con su caracteriacutestica humildad laquo[O]bedesere y dire lo q Dios me inspire segun mi rudesa y simplisidadraquo (Mss 12959 26) En cuanto a la fuerza pasional de esta joven observamos con cierta tristeza coacutemo aparece sublimada en sus escritos con toda la enegiacutea de una joven mujer llena de intensidad y vida pero encerrada en los liacutemites de un convento Veamos un ejemplo en donde responde el Alma en los siguientes versos

O mi enamorado Jesus O mi dulse y tierno amanteO alegria de los sielos O dulse Jesus amable

(Toda Sentildeor me derrito toda Sentildeor me desagoy quiero vivir por ti ea sentildeor abrasadme) [Tachado en el original]

Toda Sentildeor me derrito toda Sentildeor me desagoy quiero morir por vos ea Sentildeor que ya acabo

Ya tus amores me llaman ya tus perfumes me traencon suspiros y agonias Sentildeor hasta que te alcanse

O mi Jesus amoroso no puedo mas dilatarmeya la pasiensia me falta dulse Jesus abrasadme

(No puedo vivir sin vos no puedo mas dilatarmeya la pasiensia me falta dulse) [Tachado en el original]

No puedo vivir sin vos mi dulse Jesus amablepues me teneis echisada siendo mi esposo y mi Padre

Ay que me abraso Ay que me quemo del Amor deJesus nasareno como no tocan y tantildeen a fuego150

Estos versos llenos de arrebato sublimado conectan con toda la tradicioacuten miacutestica es-pantildeola que se remonta a Ramoacuten Llul y que culmina en el maacutes universal de nuestros

150 En toda la fuerza y simbologiacutea del amor maacutes iacutentimo del maacutes alto y sublime placer de la unioacuten de los amantes tal como lo encontramos en el Cantar de los Cantares y en San Juan de la Cruz Leemos en la Biblia

Ya me he quitado la tuacutenica iquestCoacutemo volver a vestirme Ya me he lavado los pies iquestCoacutemo volver a ensuciarlosMi amado metioacute su mano por el agujero (de la llave) y mis entrantildeas se estremecieron por eacutel Me levanteacute para abrir a mi amado Mis manos destilaron mirra y mis dedos mirra exquisita en el pestillo de la cerradura (5 3-5)

Nos ocurre lo mismo con San Juan de la Cruz en su insuperable poema laquoLlama de amor vivaraquo

iexclOh cauterio suaveiexclOh regalada llagaiexclOh mano blanda iexclOh toque delicadoque a vida eterna sabey toda deuda pagaMatando muerte en vida la has trocado

172 JUAN FRANCISCO MAURA

miacutesticos San Juan de la Cruz Esta tradicioacuten se extiende hasta finales del siglo XVII esto es hasta los finales del Barroco siendo un poco maacutes tardiacuteo en la Ameacuterica espantildeola Sin tener como propoacutesito discutir en el presente trabajo a queacute corriente miacutestica pertenece la obra de Sor Nada es necesario resaltar no obstante el hecho de que estaacute escrito por una mujer y ademaacutes de tierna edad El manuscrito 12959 Caja 26 termina con estas pa-labras laquo[T]odas estas boverias escrivi por entretenimiento siendo resien profesa en la religion Sor Nadaraquo Mas no por la juventud de su autora los escritos dejan de tener lo-gradas metaacuteforas imaacutegenes y siacutembolos sacados de la naturaleza La alegoriacutea de la unioacuten matrimonial poseeacute el fuego liacuterico de la maacutes apasionada de las relaciones amorosas vivi-ficada por perfumes flores insectos animales escarchas nieves o abrojos Por lo tanto aunque la narracioacuten destile cierta ingenuidad no carece por ello de un vocabulario rico con el sabor popular de la poesiacutea de los cancioneros y romances de tradicioacuten renacen-tista No ha sido otra mi intencioacuten que la de rescatar del olvido unos escritos en prosa y en verso llenos de frescura y espontaneidad que nos muestran la pasioacuten con que la joven novicia se laquoentrega en cuerpo y almaraquo a los menesteres de su profesioacuten guiada por un padre espiritual en esos primeros antildeos de formacioacuten Esta ha sido la razoacuten por la que presento a continuacioacuten el citado manuscrito en su totalidad

Sor Nada (Mss 1295928)

laquoEsplicacion sobre en que consiste la paz del AlmaraquolaquoQuartillas a un Alma que padece soledad interiorraquo

[7 hojas utiles en 4ordm letra del siglo XVII]

+

Esplicacion sobre en que consiste la paz del Alma

Pareseme segun mi rudo entender que la verdadera paz del Alma con-siste en una muy pura y buena consiencia en un corason liso y bien intensionado en una verdadera rectitud de espiritu en el qual el Alma procura bolar a Dios sin jamas detenerse a respetos umanos ni reparar en que me diran ni de que me censuraran sino me apresuro a seguir a unos entenderes y pareseres dorados en los quales pretende el mundo engantildear y ensuciar si se puede la puresa de un corason unicamente de Dios y de su Santa ley y se lo conserva cristalino con la divina asis-tencia de la gracia y comprendido de su Amor y temor siguiendo la luz divina de tan amante Sentildeor Dios y ombre verdadero con que este ilustrado corason ni se altera ni se mueve por los disfrasses dorados que ase el mundo y sus moradores mayormente con falssas amistades aunque con ellos muestre buena intension Con la misma grasia y luz de Dios conose el buen corason estos disfrasses que le ase el mundo y se retira de todo con espiritu y valor esto sin la menor alterasion sino que en suma paz se retira a buscar a Dios dentro de su mismo corason

173ESPANtildeOLAS DE ULTRAMAR EN LA HISTORIA Y EN LA LITERATURA

y se abrasa con su pura verdad en la qual se le descubren mil interio-res secretos tan solidos puros y verdaderos que la misma Alma queda abismada y de puro grandes no los puede bien comprender ni esplicar pero estos mismos secretos divinos le sirven de espuelas para no solo correr sino bolar con pies de plumas en seguimiento de su bien ama-do Jesus y como este soberano Sentildeor es tan amante de sus espossas las Almas luego que la ve bolar con pies de plumas la sale al encuen-tro en despoblado campo que se deve de llamar Campo de Amor de Dios y el mismo Sentildeor se viene a las manos por ser Dios que nos ama con Amor infinito de Padre benigno y amoroso con que asiendose en contra deso este divino enamorado en lo interyor de el Alma que le busca con ansias de servirle y amarle y en aquella soledad traban una conversasion amorosa y sensilla como la pluma simple de quien esto escrive

Divino enquentroDios y el Alma en la soledad

O Soberano Principe de la paz dise el Alma tus perfumes me traen a ti bolando porque alla en el mundo y sus valedores me pretendian engantildear y entretenerme con pegaminossas amistades que facilmen-te me pudieran envenenar y matarme apartandome de ti Mi dulse Jesus amable mi Redentor Soberano que con tantas ansias me sales al enquentro como siervo [ciervo] erido de mis Amores los quales tu Amor me ofrese para que con tu mismo Amor te ame y te sirva en paz sin perturbarme ni contristarme ni cansarme de padeser pasando si se ofrese por escarchas nieves espinas ni abrojos ni por otros diverssos trabajos ni piedras de contradision que tu me puedes permitir pues por mas que el mar se levante con sus ferosses olas contra mi ni piedras se me tiren al rostro en todo Sentildeor me quieres con serenidad pasifica sin la menor perturbasion Todo Sentildeor quieres que lo tome con Serenidad de espiritu y asi vengo a ti bolando para que mejor me ensentildees a vivir segun las leyes de tu noble condision que me son muy agradables por mas que el mundo me las despresie por segir sus vanidades y torsidas intensiones con apariensias de bien y con este engantildeo y bien me quie-ro mas a mi que no a mi proximo veo que segun mi pareser se pierden muchas Almas y tambien de aquellos que se depresian y pasan por muy espirituales Con que me paresen pocos los que llegan a padeser con desnudes151 de espiritu por tu purisimo Amor y me parese essas se quedan muy atrasadas en la virtud por el peligro de bolver muy atras el paso de modo que se pueden despentildear y pereser en su misma desgra-sia ya por soberbia o por otras enfermedades que se les pega al corason y asi lo pasan como siegos ignorantes sin advertir en sus peligros

151 La letra en cursiva es miacutea

174 JUAN FRANCISCO MAURA

este aquerdo Sentildeor y otros que tu verdad me ensentildea me ase venir uyendo de las paredes del mundo y me vengo a ti Dios mio bolando con las dos Alas del Amor y temor que tu mismo Amor me ofrese tan de gracia y tan de grado que no se duentildeo mio con que lo responder a tan soberano beneficio y finesa de tus entrantildeas de Amorvengo Sentildeor y esposo mio unicamente a descansar en ti pues los peli-gros del camino me an puesto en mucho sobresalto temiendo el per-derte y sin ti perderme para siempre por una eternidad sin fin pues deseo amado mio ganarme ganandote a ti y vivir en ti aora en vida y despues eternamente y estos cuidados me traen fatigada molida y cansada y no podre tener alivio y descanso sino viendome entre tus brassos aunque sea estando en cruz pues ese es el fin de mis deseos vivir y morir en ti ablame mi cordero manso y ensentildeame a que ver-daderamente te ame como fiel esposa ea mi caro amigo dame la ma-no pues sabes Amor mio que en mi no ay mano sin tu misma mano y asi mi Dios y Sentildeor mi Principe Soberano con umilde rendimiento y deseos de alcansarte te suplico me des la mano y me consueles en estos mis trabajos Deseo Sentildeor vivir en paz y los malos amores de mi Naturaleza flaca no me dejan detentar y no quieren por mi desgrasia atropellar con las leyes de tu Amor ni quisiera perturbar mi corason quando me veo con un torvellino de olas y contratiempos que a menu-do me suelen sercar pero si tu Sentildeor me das la mano nada temo sino que me aseguro y vivire en paz sin que me fatiguen los contratiempos pues mi mano en la tuya y mi espiritu en el tuyo por mas borrascas que me envistan no seran bastantes para rendir mi voluntad a la suya bien si para pronunsiar un fiat que resuene bien atras en tus oidos y que en medio de mis fatigas me ponga a cantar tus divinas misericor-dias hea Sentildeor ya pretendo serrar mis labios por no desir mas bove-rias y deseo Sentildeor oir tus palabras de vida eterna abla Sentildeor que tu sierva oye con atension y cuydado mira mi Dios que se me ase tarde y espero con prisa deseando saborearme y aprovecharme de los ecos de tu Santa dotrina pues todas tus palabras saben a eterna vida callen pues mis sentidos y potensias y todo se ponga en paz pues mi dulse y soberano Sentildeor no se escusara de ablar me aun que en mudo silensio hea mi gran Prinsipe de la paz ablame que tus puros amores me traen perdida por estos asperos montes y mis cortos pasos no te pueden dar alcanse mirame mi Dios a tus pies postrada como un vil gusano y me-nor ormiga de la tierraabla Jesus y dise a su esposa el Alma querida esposa mia que me pides y por que te muestras tan fatigada y mal sufrida no vives como corde-rita del campo buscando de mis pechos el sustancial pasto mi Amor no te sustenta y mi grasia te promete eterna vida pues dime amada de que te fatigas y te muestras mal sufrida mira que te amo con Amor de padre y con Amor de esposo el mas fino y puro enamorado que no tan solo me presio de darte mi mano sino tambien todo mi cuerpo y

175ESPANtildeOLAS DE ULTRAMAR EN LA HISTORIA Y EN LA LITERATURA

sangre para que con mi pan de vida te sustentes y te regales a tus an-churas y que con mi propio espiritu vivas en paz como tu lo deseas y que mis amores sean unico alivio en tus trabajos en esta mortal vida pues si esto es asi y sabes que muero por darte vida dime esposa mia de que te fatigas Dame querida tus brassos y dime si me amas como yo te amoResponde el Alma152 Tu mi Dios sabes si yo te amo pues de mi solo se que mis deseos y ansias buelan a ti mas no alcanso a saber si te amo como tu de-seas ser amado y como desconfio tanto de mi y de mis prosederes falssos temo Dios mio perderme y perderte y asi Sentildeor pues no desechas mis Amores y te muestras tan fino en amarme te pido me ensentildees a vivir segun las leyes de tu pura verdad y fina condisionhija mia dise Dios la prueva de un verdadero Amor consiste en sufrir callar y padeser por mi unico Amor y en todo seguir mis pasos sin ja-mas retroseder por mas fragoso que se muestre el camino pues nunca seran tantas las espinas las escarchas ni las nieves ni los vientos bo-rrascosos que te se ofrescan pasar por mi Amor como los que mi tierno y desinteresado Amor paso por ti y siempre con mis pies descalssos y asi hija y esposa mia muestrate costante en seguir lo perfecto de mis passos pues mi braso fuerte sera en ti y peleara por ti y te sera el todo en tus nesesidades y mi Amor te convertira en dulse y suave lo amargo y molesto a la condision de la carrne

Responde el Alma

O mi enamorado Jesus O mi dulse y tierno amanteO alegria de los sielos O dulse Jesus amable

(Toda Sentildeor me derrito toda Sentildeor me desagoy quiero vivir por ti ea sentildeor abrasadme) [Tachado en el original]

Toda Sentildeor me derrito toda Sentildeor me desagoy quiero morir por vos ea Sentildeor que ya acabo

Ya tus amores me llaman ya tus perfumes me traencon suspiros y agonias Sentildeor asta que te alcanse

O mi Jesus amoroso no puedo mas dilatarmeya la pasiensia me falta dulse Jesus abrasadme

(No puedo vivir sin vos no puedo mas dilatarmeya la pasiensia me falta dulse) [Tachado en el original]

No puedo vivir sin vos mi dulse Jesus amablepues me teneis echisada siendo mi esposo y mi Padre

152 La aparicioacuten de una mayuacutescula al principio de una oracioacuten es algo totalmente arbitrario en este ma-nuscrito dada la libertad ortograacutefica de la autora Como se puede observar en la mayor parte de las veces no es el caso

176 JUAN FRANCISCO MAURA

Ay que me abraso Ay que me quemo del Amor deJesus nasareno como no tocan y tantildeen a fuego

Responde Jesus Hija mia tus simples vozes oygo y aunque resuenan bien a mis oidos pero te deseo mas mansa y pasifica en tus fervores ya sabes que no siempre as de vivir en mantillas ni a los pechos de tu Madre por que es rason que padescas con espiritu fuerte como mu-jer valerosa por que a una esposa del Rey soberano y prinsipe de la paz no le estan bien chiquerias ni fervores de nintildea malcriada y ya es ora que la destete su Madre la Naturaleza y que empesando su nueva vida camine con el favor de mi grasia sigiendo mis passos de eterna vida esto con sus pies descalssos segun mis leyes de Amor puro y desinteresado lo tienen ordenado153 y vivir en paz como lo deje en-cargado a mis apostoles Santos repitiendoles varias vezes Vivir en pas y caridad esto es un vivir en Dios y Dios en el Alma y asi hija mia el Alma que vive en paz vive en mi Como mis cortesanos en el cielo y pues me pides que te ensentildee a vivir segun las leyes de mi condision Repito el desir que te debes mostrar sufrida en todo tiempo y estado sin permitir en tu corason que ni aun los fervores se adelanten con estremos ni ademanes sino atiende y aprende de mi purisima Madre pues siempre la veras si bien lo consideras que mientras vivio en el mundo en todos sus trabajos se mostro firme fuerte costante como piedra diamante Pues mirandome nintildeo entre sus brasos desnudo en el pesebre desnudo y crusificado en los brassos de una cruz En estos y otros passos no se mudo su rostro sino que en suma serenidad y pasifico corason toda se sacrificaba enteramente en los brassos de mi Amor y rendido su corason y voluntad en la de mi eterno Padre por ejemplo te la doy y deseo que aprendas de sus nobles calidades pues te aseguro carisima que las leyes de mi condision y pura verdad todo lo allaras enserrado en el corason de mi purisima Madre sedle fiel y descansaras en paz

+

Quartillas a un alma que padese soledad interior

1Un Alma afligida y tristese ve en un campo desiertay en el su esposo la tieneAtormentada y sedienta

153 Es a traveacutes de estas liacuteneas lo que hace suponer que la autora de este diaacutelogo amoroso entre el Alma y Je-suacutes es novicia esto es laquoque estaacute empesando su nueva vidaraquo En las mismas liacuteneas una vez maacutes se hace alusioacuten al laquodesteteraquo de su vida civil laquoa una esposa del Rey soberano y principe de la paz no le estan bien chiquerias ni fervores de nintildea malcriada y ya es ora que la destete su Madre la naturalesaraquo (fol 5)

177ESPANtildeOLAS DE ULTRAMAR EN LA HISTORIA Y EN LA LITERATURA

2Pendiente se ve en el AyreSolo un hilo la sustentasin tocar el pie en el sueloporque del no tome tierra

3Mirandola esta yto a ytoaquel sol que la atraviesay la enviste con sus rayosmas ella no pestantildeea

4Como sigarra padese y como a tal se atormentabatiendo sus mismas Alasy el corason se atraviesa

5Con penas sustos temoresquando se mira assi mesmasin tener valor en nadaporque es la misma flaquesa

6Pero el Amor de su esposotoda su atension le llevay la pone en un abismopero cubierto en tiniebla

7Desea dar algun bueloy subir con ligeresapero se mira travadacon una fuerte cadena

8Clama suspira y padeseMas del todo se sujetaRindiendo su voluntadA la divina clemencia

9Los enemigos del AlmaCruelmente le asen guerray ella aunque firme y constantelos reselos la atormentan

178 JUAN FRANCISCO MAURA

10de todos modos padeseaunque gosa la asistensiadel divino esposo amadoque en su interior se recrea

11Solo de verla penary con verla tan serenadise resibe mil gustosde su sigarra pequentildea

12Le sabe el mundo a mil yelesy su trato le atormentaviendo en el mil falsedadesque todas saben a tierra

13Para poderse librardeja de correr y buelacon las Alas del Amory el mismo Amor se la lleva

Una vida dedicada a un amor divino un amor que le haraacute llenar un buen nuacutemero de cuartillas dedicadas a tan alta empresa Se desconoce si la vocacioacuten de Sor Nada con-tinuoacute con tanta intensidad el resto de sus diacuteas Ciertamente la vida en el covento no era faacutecil En algunos casos la experiencia era traumaacutetica incluso fatal para algunas de las adolescentes de la Ameacuterica Espantildeola Las reglas del claustro eran severas por varias razones Estas joacutevenes si no teniacutean el permiso de la superiora no podiacutean recibir visitas no podiacutean volver a sus casas su correspondencia era censuraba y no podiacutean salir del periacutemetro conventual Igualmente se levantaban antes del amanecer para oir misa tra-bajaban el resto del diacutea y lo maacutes interesante es que muchas veces esta vida era aceptada por muchas

Page 2: Tercera parte: Mujeres en la vida intelectual - …parnaseo.uv.es/Editorial/Maura/TerceraParte.pdf · La Biblia, por su parte, hace repetidas menciones de la mujer y sobre el comporta-

132 JUAN FRANCISCO MAURA

by his genious he who thinks for himself who thinks spontaneously and exactly possesses the only compass by which he can steer aright A man should read only when his own thoughts stagnate at their source which happen often enough even with the best minds (Shopen-hauer The Art of Literature)

Si bien es cierto que en la sociedad espantildeola la mujer no ha ocupado tradicionalmente el privilegiado papel del hombre tambieacuten lo es que muchas familias salieron adelan-te gracias al coraje y dedicacioacuten de mujeres que sacrificaron sus existencias para sacar adelante a sus hijos Espantildea ha sufrido multitud de guerras a lo largo de su historia lo que ocasionoacute una gran mortandad masculina durante dichos conflictos A menudo han sido las viudas las que han tenido que ocupar el papel de sus maridos para no caer en la miseria La caballerosidad cualidad que tan unida va con la honra no ha hecho no obstante que hoy en Espantildea se respete y defienda a la mujer como se debiera En algu-nos casos tambieacuten es la mujer quien recuerda al hombre mdashiexcly de queacute maneramdash el pa-pel que eacuteste debe desempentildear como tal En Las Siete Partidas el rey Alfonso X El Sabio hace observar en la Ley II laquoComo el Rey debe amar et honrar et guardar a su mugerraquo Las razones que da el rey Sabio son tres la primera es que siendo la pareja una unidad cuanto maacutes se honre a la mujer maacutes honrado seraacute el marido La segunda es que vieacutendo-se la mujer honrada por su marido tendraacute laquomayor razoacuten de querer siempre su bien et su honraraquo y la tercera dice que siendo la mujer honrada los hijos que eacutesta tenga seraacuten tambieacuten maacutes honrados y maacutes nobles (129)

Estas palabras de Alfonso X sirven como ejemplo de comportamiento a la poblacioacuten general laquoa todos los de su tierraraquo laquoOnde el rey que desta guisa amare et honrare et guardare a su muger seraacute el amado et honrado et guardado de ella et daraacute buen exem-plo a todos los de su tierra maacutes para facer todas estas cosas bien et complidamente ha mester quel deacute atal compantildea de homes et de mugeres que teman a Dios et sepan guar-dar la honra deacutel et dellaraquo (128)

Las fuentes de las Partidas estaacuten basadas en los antiguos laquofuerosraquo en los escritos de San Agustiacuten San Gregorio y por supuesto en diferentes pasajes biacuteblicos Antonio Saacuten-chez Romeralo y Fernando Ibarra resaltan la importancia que tuvieron estas leyes en los nuevos territorios descubiertos en el Nuevo Mundo Africa y Asia llegando a ser el or-denamiento legal de mayor vigencia hasta fechas sorprendentemente recientes incluso hasta en territorios de los Estados Unidos laquopor ejemplo en Luisiana en una sentencia de 1924 algunas leyes sobre lsquocommunity propertyrsquo en Estados Unidos que estaban en vi-gor en algunos estados y hoy se han extendido a todos proceden de las Partidasraquo (38)

Si buscamos esta manera de pensar en el contexto de la conquista podemos en-contrar ejemplos muy significativos El franciscano Fray Juan de Torquemada primero entre los cronistas franciscanos que alcanzoacute la publicacioacuten de su obra principal hace mencioacuten no solamente de mujeres sino del deber casi sagrado de respetarlas y pro-tegerlas Los indios chichimecas llamados laquoHuachichilesraquo en cierta ocasioacuten atacaron un poblado espantildeol matando a toda la gente que en eacutel estaba y llevaacutendose ademaacutes a tres mujeres espantildeolas Los espantildeoles al poco tiempo encontraron el cadaacutever de una de ellas laquocuajado de flechasraquo La enorme indignacioacuten y rabia no por el ataque al cam-pamento sino por la muerte de esta indefensa mujer queda reflejado de la siguiente manera por el cronista franciscano

133ESPANtildeOLAS DE ULTRAMAR EN LA HISTORIA Y EN LA LITERATURA

que por ser vieja (que dicen pasaba de setenta antildeos) debieron de matarla que como baacuterbaros no atendieron a que era mujer y que por serlo mereciacutea estimacioacuten y respeto que son en lo natural por quien vivimos y somos que nos criacutean y dan leche cuando en los tiernos y primeros antildeos de nuestra vida no tenemos saber para velernos ni as-tucia ni mantildea para alimentarnos pero como gente que careciacutea de este discurso y razoacuten la mataron y dejaron en aquellos montes tan cua-jada de flechas como erizo de espinas Sintieacuteronlo mucho los nuestros y enterraacutendola por ser cristiana pasaron adelante que me parece que para ir con mucha prisa y mayor aacutenimo de alcanzar los enemigos llevaban por blanco la coacutelera y rabia de haber visto semejante espec-taacuteculo siendo cosa vil y apocada poner manos en mujer sino es de-masiadamente culpada y que cada cual propondriacutea en su corazoacuten de vengar la injuria como injusta y hecha a mujer flaca y sin resistencia (640-41 lib 5 cap 23)

El mismo Juan de Torquemada en otro de sus comentarios sobre ciertas disputas intestinas entre pueblos mejicanos dice laquoen especial las mujeres cuya lengua es maacutes feroz y cruel cuando la pasioacuten y la ira la gobierna y rigeraquo (177 lib cap 58) Lo que demuestra en cierta manera que la visioacuten general de la mujer no se limita a la de un ser indefenso por naturaleza sino diferente y digno de respeto no soacutelo por su delicadeza sino por su ferocidad

La tradicioacuten catoacutelica lleva a la identificacioacuten de la madre con la Virgen Mariacutea y el nintildeo Jesuacutes Esta identificacioacuten mariana ha formado parte del sentimiento de los espantildeoles desde su maacutes tierna juventud pasoacute a la Ameacuterica hispana y alliacute germinoacute de tal manera que hoy en diacutea se puede decir que el culto a la Virgen en Hispanoameacuterica supera en muchos casos a cualquier otra forma de identificacioacuten a nivel poliacutetico religioso o inclu-so deportivo

Es necesario ver cuales son las raiacuteces maacutes profundas del trato y concepto que se ha te-nido de la mujer en Espantildea asiacute como la incidencia de ciertas obras clave para entender esta determinada forma de ser y de pensar Sin pretender hacer un estudio socioloacutegico ni antropoloacutegico del tratamiento que los pueblos agriacutecolas dieron a los miembros de sus sociedades vale la pena tener en cuenta que hasta hace muy poco en el caso de Espantildea la agricultura junto con la religioacuten han sido el eje sobre el que han girado la mayor parte de las manifestaciones sociales muacutesica danza ceremoniales literatura supersticiones etc Espantildea paiacutes tradicionalmente agriacutecola y marinero con una poblacioacuten urbana rela-tivamente pequentildea especialmente en Castilla basoacute sus modelos principalmente en las ensentildeanzas grecolatinas y en la Biblia Para ser maacutes exactos durante la Edad Media el pensamiento escolaacutestico reinante supo sincretizar magistralmente la manera de pensar de Aristoacuteteles con las laquoSagradas Escriturasraquo Este laquosincretismoraquo seraacute igualmente utiliza-do maacutes tarde para adaptar el pensamiento cristiano con las religiones amerindias Aris-toacuteteles y la Biblia seraacuten pues dos referencias fundamentales a la hora de interpretar la idiosincrasia femenina Los principales intelectuales y teoacutelogos de la eacutepoca Sahaguacuten Las Casas Sepuacutelveda Duraacuten Montesinos etc mencionaraacuten a cada momento al laquofiloacute-soforaquo y su palabra seraacute siempre tenida en cuenta La iglesia catoacutelica seraacute por lo tanto el vehiacuteculo utilizado para llevar a cabo tal adoctrinamiento en las tierras descubiertas de

134 JUAN FRANCISCO MAURA

la misma forma que se habiacutea venido haciendo secularmente en tierras peninsularesAristoacuteteles en su Poliacutetica obra traducida al latiacuten en el siglo XIII por Santo Tomaacutes de

Aquino hace mencioacuten de la mujer junto con los esclavos y de la idea que de eacutestas te-niacutean los laquono griegosraquo

1252a34 Nature then has distinguished between female and slave she recognizes different functions and lavishly provides different tools not an all purpose tool like the Delphic knife for every instrument will be made best if it serves not many purposes but one But non-Greeks as-sign to female and slave exactly the same status (57 lib1 cap 2)

La Biblia por su parte hace repetidas menciones de la mujer y sobre el comporta-miento que eacutesta debe seguir en la sociedad de sus obligaciones y derechos para con su marido y demaacutes menesteres de tipo socioloacutegico que tienen como base comuacuten la familia en su calidad de centro de la sociedad judeo-cristiana El tono general sobre la mujer variacutea seguacuten los diferentes libros biacuteblicos Como norma se suele presentar un tono de subordinacioacuten al marido y en algunos casos de absoluto desprecio principalmente en el Antiguo Testamento Sirva de ejemplo este pasaje de Ester laquoTuacute lo sabes todo y sa-bes por lo tanto coacutemo aborrezco la gloria de los inicuos y detesto el lecho de los incir-cuncisos y de todos los extrantildeos Tuacute conoces que soacutelo por necesidad estoy donde estoy que detesto las sentildeales de mi gloria que llevo sobre la cabeza en los diacuteas de mi puacuteblica presentacioacuten que las abomino como pantildeo de menstruacioacutenraquo (Ester 14 15-17)

En el laquoDeuteronomioraquo aparece otro singular ejemplo del papel de la mujer en situa-ciones tan comunes como una pelea entre dos hombres Si bien en este caso la mujer en cuestioacuten es capaz de coger de los genitales al enemigo de su marido durante la con-tienda el castigo que se solicita para la mujer es desproporcionado e inhumano laquoiexclSi mientras rintildeen dos hombres uno con otro la mujer del uno interviniendo para librar a su marido de las manos del que le golpea agaacuterrase a eacuteste por las partes vergonzosas le cortaraacutes las manos sin piedadraquo (Deuteronomio 25 11-13)

En los proverbios se cita un ejemplo maacutes ilustrativo auacuten de la capacidad de la mujer laquolascivaraquo de atraerse con todo tipo de insinuaciones amorosas la atencioacuten de un laquopobreraquo marido ingenuo e indefenso ante tan manifiestas provocaciones Resulta interesante observar sobre todo coacutemo se presenta a la mujer a modo de una serpiente que encanta con sus provocaciones y su astucia a una viacutectima indefensa laquosimple y falto de juicioraquo

Era el atardecer cuando yaobscureciacutea al hacerse de nocheen la tinieblaY he aquiacute que le sale al en-cuentro una mujer con ataviacuteo deramera y astuto corazoacutenEra parlanchina y procaz ysus pies no sabiacutean estarse en casaahora en la calle ahora en la plaza acechando por todas las esquinasAgarrole y le besoacute y le dijo

135ESPANtildeOLAS DE ULTRAMAR EN LA HISTORIA Y EN LA LITERATURA

con toda desverguumlenzaTeniacutea que ofrecer un sacri-ficio y hoy he cumplido ya mis votosPor eso te he salido al encuentro iba en busca de ti y aho-ra te halloHe ataviado el lecho con ta-pices con telas de hilo recamadode EgiptoHe perfumado mi caacutemaracon mirra aacuteloe y cinaacutemonoVen embriageacutemonos deamores hasta la mantildeana harteacute- monos de cariciasPues mi marido no estaacute encasa ha salido para un largoviajeSe ha llevado la bolsa y no volveraacute hasta el plenilunioCon la suavidad de sus pala-bras le rindioacute y con sus halagos le sedujoY se fue tras ella entonteci-do como buey que se lleva almatadero como ciervo cogido enel lazoHasta que una flecha le atra-viesa el hiacutegado o como paacutejaro que se precipita en la red sin saber que le va en ello la vida (Proverbios 7 9-24)

El laquopobre paacutejaroraquo cayoacute en la red hipnotizado por la serpiente Desde el laquoGeacutenesisraquo hasta laquoMalaquiacuteasraquo esto es desde el principio al fin del Antiguo Testamento se puede apreciar en menor o mayor grado la misoginia cararacteriacutestica de una sociedad pa-triarcal Seriacutea prolijo citar todos aquellos pasajes donde esto se confirma siendo tal vez los siguientes algunos de los maacutes representativos laquoEl varoacuten no debe cubrir la cabeza porque es imagen y gloria de Dios mas la mujer es gloria del varoacuten pues no procede el varoacuten de la mujer sino la mujer del varoacuten ni fue creado el varoacuten para la mujer sino la mujer para el varoacutenraquo (Corintios 11 7-10) El proacuteximo fragmento hace referencia a la laquomujer disolutaraquo Para que te guarden de la mala mujer de los alagos de la mujer ajena No codicies su hermosura en tu corazoacuten no te dejes seducir por sus miradas Porque si la prostituta busca un pedazo de pan la casada va a la caza de una vida preciosa iquestPuede llevar uno fuego en su regazo sin quemarse los vestidos (Proverbios 6 24-28)

136 JUAN FRANCISCO MAURA

No es difiacutecil imaginar la repercusioacuten de esta argumentacioacuten si se hace de ella una inter-pretacioacuten literal sobre todo ante un pueblo de mayoriacutea analfabeta o poco instruida

Claro estaacute que seriacutea absurdo querer hacer un anaacutelisis literal de las palabras de las laquoSa-gradas Escriturasraquo Sin embargo eacutestas han influido e influyen en la sociedad occidental a un nivel maacutes elevado de lo que comuacutenmente se piensa a veces de manera incons-ciente De cualquier manera sin entrar en una comparacioacuten teoloacutegica entre el Yaveacute del Antiguo Testamento y Jesucristo en el Nuevo Testamento la diferencia que se hace del elemento femenino entre estos dos libros es laquonotableraquo Dice Yaveacute a Sauacutel laquoNo perdones mata a hombres mujeres y nintildeos aun los de pecho bueyes y ovejas camellos y asnosraquo Forma de pensar eacutesta que no concuerda con el laquoamor al proacutejimoraquo del Nuevo Testamen-to donde la venganza y el odio pasan a ser amor y resignacioacuten

En la Edad Media espantildeola existieron algunas leyes que teniendo como objeto a la mujer dejan entrever el derecho y las limitaciones con que eacutestas contaban en caso de abuso por parte de los hombres Un ejemplo de estos derechos o laquofuerosraquo podiacutean ser muy bien los de Jaca otorgados en el antildeo de 1077 por el rey Sancho Ramiacuterez Estos fueros en opinioacuten de Antonio Ubieto Arteta laquose extendieron a muchas poblaciones de Espantildearaquo Veacuteanse las siguientes claacuteusulas laquoK) Si alguien faltase con mujer con el consen-timiento de ella no siendo casada no pagariacutea multa pero si usase violencia deberiacutea tomarla por esposa o proporcionarle marido L) La mujer ultrajada deberaacute pedir justicia en los dos primeros diacuteas inmediatos a su deshonra presentando testigos Si pasan los tres primeros diacuteas sin reclamar ya no tendraacute derecho (Ubieto 135-36)

Observar el desarrollo que fue teniendo el papel de la mujer dentro de la sociedad especialmente de la espantildeola resulta sin duda interesante desde un punto de vista so-cioloacutegico Gracias a ello podremos comprender mucho mejor el posterior desarrollo de su participacioacuten en los acontecimientos de la eacutepoca que las tocoacute vivir y su posterior proyeccioacuten en el Nuevo Mundo siempre teniendo en cuenta el margen maacutes o menos estrecho que la Iglesia Catoacutelica y la mentalidad de la eacutepoca impusieron en mayor o menor grado a lo largo de diferentes periacuteodos Es por eso por lo que debemos indagar maacutes profundamente en todo lo relacionado con la actuacioacuten de la mujer en tierras de ultramar y sobre todo valorar sus acciones no como hechos marginales y esporaacutedicos sino como la base y los cimientos de una sociedad que todaviacutea sigue viva Son las voces de estas mujeres aquellas que se han podido rescatar el mejor testimonio Fueron las madres de los espantildeoles del siglo XVI dice Fernaacutendez Duro las que hicieron posible que en tan corto nuacutemero de antildeos se hiciese un derroche tan formidable de energiacutea en todos los mares y continentes de nuestro planeta

iexclQueacute grandeza queacute arrojo el de Espantildea en el siglo XVI Jamaacutes vio el Mundo energiacutea actividad y fortuna semejantes Para los espantildeoles no habiacutea obstaacuteculos en los riacuteos en las montantildeas ni en los desiertos Jun-taacutebanse unos cuantos creaban escuadras conquistaban imperios y fundando ciudades discurriacutean el modo de unir los mares y los climas Diriacutease que eran de procedencia de gigantes o de semidioses Eraneran hijos de tales madres (Duro 26)

Garcilaso de la Vega El Inca (1536-1616) cronista peruano hijo de un capitaacuten espantildeol y de una princesa inca tambieacuten se hace eco en su obra Historia general del Peruacute (segunda parte de sus Comentarios Reales) de la opinioacuten de algunas sentildeoritas que pasaron al Nuevo

137ESPANtildeOLAS DE ULTRAMAR EN LA HISTORIA Y EN LA LITERATURA

Mundo con la idea de encontrar al hombre de sus suentildeos en este caso al conquistador llevaacutendose una gran sorpresa al comprobar coacutemo las heridas las inclemencias del tiem-po y las enfermedades habiacutean dejado sus huellas en los rostros de estos hombres que no eran como se los imaginaban Este fue el comentario de una de las doncellas casade-ras que llevoacute don Pedro de Alvarado a Guatemala

iquestDicen que nos hemos de casar con estos conquistadores dixo una dixo otra iquestcon estos viejos podridos nos habiacuteamos de casar caacutesese quien quisiere que yo por cierto no pienso casar con ninguno dellos dolos al diablo parece que escaparon del infierno seguacuten estaacuten de estro-peados Unos cojos otros mancos otros sin orejas otros con un ojo otros con media cara y el mejor librado la tiene una dos y tres vecesraquo Dijo la primera laquoNo hemos de casar con ellos por su gentileza sino por heredar los indios que tienen que seguacuten estaacuten de viejos y cansados se han de morir presto y entonces podremos escoger el mozo que qui-sieacuteremos en lugar del viejo como suelen trocar una caldera vieja y rota por otra sana y nueva (Garcilaso vol 2 lib 2 cap 1 80)

Al escuchar estas palabras un caballero que se encontraba al otro lado de la cortina donde estaban hablando no pudieacutendolo sufrir maacutes las afrentoacute pasando luego a decir-les a los caballeros los laquobuenos deseosraquo de las damas Se marchoacute a su casa llamoacute a un cura y se casoacute con una india con la que ya teniacutea dos hijos a los que legitimoacute para que no pasasen a ser esclavos o criados de ninguna de esas sentildeoras (Garcilaso vol 2 lib 2 cap 1 81)

Muchas de estas primeras mujeres pasaron a ser viudas varias veces a causa precisa-mente de la muerte del marido en las diferentes campantildeas de los primeros antildeos

Fueron las descendientes de las mujeres que vinieron con los conquistadores las que de una manera definitiva asentaron las raiacuteces de una nueva sociedad que llegariacutea al mismo esplendor y refinamiento que la de la metroacutepoli El trasplante ya estaba realiza-do La violencia del laquoencuentroraquo de los primeros antildeos habiacutea dado como fruto una nueva sociedad que habiacutea heredado las bases de la cultura espantildeola y que teniacutea ademaacutes todo el encanto y riqueza de las variadiacutesimas culturas precolombinas

La primera generacioacuten corresponde ya a la mujer criolla hija de pobla-dora aquella que educoacute a los hijos propios y a los ajenos suavizando las costumbres baacuterbaras de la eacutepoca belicista Lo cierto es que a pesar de todas las vicisitudes la mujer hizo posible la creacioacuten del hogar en el que se fraguoacute la transculturacioacuten la sociedad gracias a su presencia fue perdiendo vulgaridad hasta alcanzar un notorio refinamiento Aun-que la paz tardoacute en llegar las treguas favorecieron el asiento en villas y ciudades En ellas florecioacute el romancero y la copla medieval junto a la arquitectura goacutetica el balcoacuten canario y el patio andaluz (Borges 436)

Ya fuese en la ciudad de Meacutexico o en la de Lima la mujer criolla gustaba de todas aquellas sofisticaciones que podiacutean disfrutar las mujeres de Sevilla o de la corte To-das teniacutean ademaacutes criados A mediados del siglo XVI empezaraacuten las navegaciones en-tre Meacutejico y las Filipinas lo que contribuiraacute a enriquecer los atuendos de las mujeres criollas asiacute como espantildeolas con artiacuteculos tan exoacuteticos en su diacutea pero tan castizos hoy

138 JUAN FRANCISCO MAURA

como el mantoacuten de Manila o el abanico Fray Reginal de Lizaacuterraga dice sobre las mu-jeres del Peruacute

La criolla es ademaacutes mujer que gusta de la ostentacioacuten y del lujo vi-cios muy femeninos que en parte la compensaban de pasadas o futu-ras calamidades En el Peruacute el vestuario se hizo tan ostentoso laquoque casi no se sabe coacutemo lo pueden sufrir los maridosraquo La soberbia de ellas es demasiada y no sabemos en lo que ha de parar no creo que hay en lo descubierto del mundo ciudad en su tanto ni cuatro veces mayor que a tanta soberbia en este particular como esta nuestra ciudad llegueCon justo tiacutetulo se podriacutea moderar por los virreyes esta soberbia Pe-ro no seacute por queacute no se modera y siacute seacute por queacute ni los maridos tienen aacutenimo para moderarlo ni los gobernadores tampoco (Lizaacuterraga 38 lib 1 cap 51)

La mujer criolla participa en todos los aconteceres de su sociedad Estaacute presente en todos los acontecimientos sociales y con frecuencia econoacutemicos sin dejar por ello de controlar la vida del hogar Al igual que en Espantildea ellas se encargaraacuten de casar a sus hijas e hijos unos destinados a mantener la tradicioacuten familiar y enriquecerla otros a engrosar las filas de la iglesia

Mujeres en la vida intelectual espantildeola durante los siglos XVI y XVII131

Great genuine and extraordinary work can be done only in so far as its author disregard the method the thoughts the opinions of his contemporaries and quietly works on in spite of their criticism on his side despising what they praise No one becomes great without arrogance of this sort (Shopenhauer The Art of Literature)

De igual manera que se ha querido excluir a la mujer de las primeras paacuteginas del encuentro con el Nuevo Mundo otro tanto ha ocurrido con la labor intelectual de tan insignes mujeres Muchas pese a lo remoto de sus asentamientos lograron dar a luz los maacutes valiosos frutos de la poesiacutea liacuterica de su tiempo132 Un gran nuacutemero de estas mujeres dada la estratificacioacuten social de su eacutepoca desarrolloacute su labor en conventos Otras sin embargo hicieron lo mismo compaginando sus vidas matrimoniales con las tareas culturales La vida monacal daba ventaja en cierta forma a la hora de conseguir la independencia deseada para dedicarse por completo al mundo de las letras sin que un

131 Veacutease mi artiacuteculo laquoCara y cruz de la mujer hispana imaacutegenes del siglo XVIraquo132 Veacutease el ejemplo de Mariacutea de Alvarado la Amarilis de Lope de Vega que escribioacute su obra en los maacutes

apartados rincones de los Andes peruanos Veacutease Meneacutendez y Pelayo Marcelino Historia de la Poesiacutea Hispano-Americana 84

139ESPANtildeOLAS DE ULTRAMAR EN LA HISTORIA Y EN LA LITERATURA

marido o unos hijos se interpusiesen en el tiempo concentracioacuten y dedicacioacuten que una actividad artiacutestica requiere Pese a todo no siempre fue asiacute El maacutes conocido ejemplo lo tendriacuteamos en Sor Juana Ineacutes de la Cruz la cual tuvo que sufrir problemas con algunos altos cargos eclesiaacutesticos asiacute como envidias de propios y extrantildeos por ser entre otras cosas superior en inteligencia y cultura a la mayor parte de sus contemporaacuteneos

Muchos conventos estaban bien provistos de libros a menudo donados por aquellas familias que teniacutean alguacuten miembro dentro del convento o simplemente por simpati-zantes de las diferentes oacuterdenes religiosas En la paz del claustro algunas de estas mu-jeres llegaron a adquirir un formidable desarrollo intelectual Pero a pesar de la calidad del material que existe sobre tan insignes mujeres se las ha preferido mantener en la oscuridad Como deciacutea con ironiacutea el pensador espantildeol Benito Feijoacuteo (1676-1764) sobre las disputas entre hombres y mujeres laquoLo cierto es que ni ellas ni nosotros podemos en este pleito ser jueces porque somos partes y asiacute se habiacutea de fiar la sentencia a los aacutengeles que como no tienen sexo son indiferentesraquo (46)

El escritor argentino Vicente G Quesada ya se quejaba a principios del presente si-glo de la pobriacutesima informacioacuten que ofreciacutea la enciclopedia francesa Larousse sobre la vida colonial en Meacutexico cuando refirieacutendose a eacutesta deciacutea lo siguiente laquoLos uacutenicos libros que se conociacutean eran el almanaque el catecismo del P Ripalda el Antildeo cristiano la vida de los santos y otros de ese geacuteneroraquo (Quesada 125) El mismo autor refutando lo anterior escribe

Por uacuteltimo recordareacute la notabiliacutesima publicacioacuten moderna La Bibliogra-fiacutea mejicana del siglo XVI eruditiacutesima y que constituye el maacutes concluyen-te testimonio para desautorizar la ligereza del Dictionnaire de Larousse que afirma lo que ignoraEl celebrado escritor mejicano don Francisco Pimentel ha publicado su erudita obra Historia criacutetica de la literatura y las ciencias en Meacutejico desde la conquista hasta nuestros diacuteas es un trabajo que comprende cuatro partes divididas asiacute Novelistas oradores historiadores y autores cientiacuteficos Por esta breve relacioacuten se comprende que es temeridad indisculpable pretender dar noticias del movimiento intelectual en el virreinato de Meacutejico sin conocer las obras de Pimentel y de Garciacutea Icaz-balceta ni la edicioacuten primitiva o corregida de Beristain (126)

En los maacutes importantes nuacutecleos urbanos de Meacutexico y Peruacute se podiacutea apreciar clara-mente la participacioacuten directa de la mujer en las maacutes diversas actividades sociales y cul-turales Esta participacioacuten llegoacute incluso al extremo de algunas mujeres que insultaron li-teralmente a las autoridades competentes cuando lo creyeron necesario laquoEstas mujeres que lloran seriacutean las mismas que creyeron como causa principal de aquellas muertes las disposiciones de las Leyes Nuevas porque no tuvieron empacho de insultar al virrey Blasco Nuacutentildeez Vela a quien lsquodieron gritasrsquo (sic) las espantildeolas y lo maldijeron como si llevara consigo la ira de Diosraquo (Borges 52) Lo mismo ocurre en la peniacutensula Dentro del plano cultural durante la primera mitad del siglo XVII destacaraacute entre los escritores de su tiempo Mariacutea de Zayas y Sotomayor gran novelista y defensora de los atributos de su sexo cuya obra narrativa y dramaacutetica disfrutoacute de una gran popularidad en la peniacuten-sula asiacute como en Hispano-Ameacuterica laquoCasi no ha habido novelista maacutes simpaacutetico a los lectores espantildeoles que Dontildea Mariacutea de Zayas seguacuten las muchas reimpresiones que se han hecho de sus obrasraquo (E Fernaacutendez de Navarrete xcvii) Entre sus admiradores contoacute

140 JUAN FRANCISCO MAURA

con el infatigable y genial Lope de Vega que la elogioacute en su obra El laurel de Apolo laquoNo desaprovechoacute Dontildea Mariacutea ninguna ocasioacuten de abogar por las mujeres contra la tiraniacutea de los hombres suponiendo que como deacutespotas las quieren ignorantes para tenerlas sujetasraquo (E Fernaacutendez de Navarrete xcvi)

Pero no tiene que ser exclusivamente una mujer la que defienda los atributos y los derechos de su sexo Se podriacutean citar varios ejemplos donde desde los inicios de las letras espantildeolas la mujer aparece comprendida e incluso defendida por escritores con-temporaacuteneos Veacuteanse los siguientes versos escritos en el siglo XIV por el genial Arcipres-te de Hita

Mujeres abrid los oiacutedos y escuchad una buena leccioacuten escuchad estas palabras guardaos del varoacuteniexclGuardaos no os acaezca como el leoacutenal asno sin orejas y sin su corazoacuten(892)133

No se puede despreciar la influencia que tuvo en la Espantildea del siglo XVI Erasmo de Roacutetterdam el intelectual maacutes reputado de su tiempo Erasmo con una clarividencia mental poco comuacuten trata de los temas maacutes cotidianos asiacute como de los maacutes profun-dos Sus escritos siempre al borde de lo hereacutetico dejaron bien claro su independencia ideoloacutegica Tambieacuten supo dar su opinioacuten sobre las mujeres y de la importancia que una buena educacioacuten supondriacutea a la hora de llevar a cabo las tareas diarias

With regard to female education Erasmus is unequivocal In Abbatis et eruditae he categorically states that education and learning are as desirable in a woman as in a man And although there is naturally no suggestion that the education and learning should be directed towards a career there are no carping restrictions as to what the education should consist of or where the learning should end (McKendrick 9)

Fue una mujer en particular la que llamoacute la atencioacuten del erudito holandeacutes Catalina de Aragoacuten hija de Isabel la Catoacutelica Grandes debieron ser las virtudes de esta dama cuando tan renombrados laquolibrepensadoresraquo la calificaban como laquomilagro del aprendi-zaje femeninoraquo

At the centre of the movement was a Spanish woman Catherine of Aragon first wife of Henry VIII of England Her mother Isabel la Catoacutelica had made sure that Catherine and her sisters received an advanced and enlightened education under two eminent Italian hu-manists Antonio and Alessandro Geraldini and Catherine herself was considered by Erasmus and Sir Thomas Moore to be a miracle of fe-male learning At her request Juan Luis Vives between 1524 and 1528 wrote his De institutione feminae christianae for her daughter Mary and he dedicated it to Catherine (McKendrick 6)

La pobre Catalina ya presagiaba su triste final Existe una dramaacutetica y muy poco co-nocida carta conservada en la Academia de la Historia donde eacutesta escribe a su sobrino el emperador Carlos V pidieacutendole ayuda y proteccioacuten a su desesperada situacioacuten en Inglaterra

133 Juan Ruiz Libro de Buen Amor 193

141ESPANtildeOLAS DE ULTRAMAR EN LA HISTORIA Y EN LA LITERATURA

Muy alto y poderoso sentildeor por las letras que a vuestra magestad e escrito a visto el tenor que siempre en este my negocio e tenido agora que veo el peligro que tanto tiempo lo e esperado torno a suplicar lo mismo que asta agora e echo y es que por permisioacuten de dios y por el deudo y sangre que entre vuestra magestad y my ay quiero de vos es-pecial memoria del peligro en que estoy y de los ynconvenientes que se espera allende que dios muy grande mire para ofendido si el Rey my sentildeor pone en efecto lo que todo este reyno tome en este parlamento de todo lo que para estar informado vuestra magestad por su embaxa-dor que aquiacute reside para el remedio tengo esperanza en dios bastaraacute lo que vuestra alteza proveeraacute conque se aga con tiempo no tengo maacutes que decir sino que todo ese reyno y maacutes los perlados y doctas personas que en esta causa defienden estaacuten muy sentidos de la dilacioacuten que su santidad del papa en este negocio a dado y quexanse mucho dello pues por vuestra parte nunca sino justicia se le a demandado y estaacuten el diacutea de oy tan firmes como asta agora para averlo de declarar donde fueren y debe ser entyendese esto poniendo la question como puacuteblicamente se platica que para en lo secreto no ay necesidad de ablar en ello y crea vuestra magestad de que esta verdad y dios me sostienen porque para proseguir mis trabajos no vastaraacute cuerpo humano y confiando en eacutel le suplico guarde la vida de vuestra magestad y acreciente su estado como yo deseo Degramache a 11 de enero= Humilde tiacutea de vuestra magestad= Catalina (RAH Atoacutegrafo precioso Caja 3 Nuacutem 23 Dontildea Catalina de Aragoacuten Reina de Inglaterra Antildeo 1530 Carta al emperador Carlos V pidieacutendole proteccioacuten)

La pobre Catalina presagiaba su triste fin ya que seis antildeos despueacutes la que fuera hija menor de los Reyes Catoacutelicos pasariacutea a mejor vida El no haber podido dar un hijo he-redero al rey Enrique VIII hizo que eacuteste se casase con Ana Bolena declarando nulo su matrimonio anterior sin consentimiento del Papa Roma le excomulgoacute pero eacutel mismo se proclamoacute jefe de la iglesia anglicana A pesar de todo Catalina muere enamorada de su marido y estas uacuteltimas liacuteneas con las que termina su uacuteltima carta y su vida son sufi-cientemente expliacutecitas laquoJuro que sobre todas las cosas mis ojos desean volver a verosraquo (Ximeacutenez de Sandoval 131)

Pese a la enorme influencia directa o indirecta que Erasmo tuviese sobre los pensado-res de la Espantildea del siglo XVI no debemos dejar de destacar tambieacuten la de Fray Luis de Leoacuten tanto por su cariz independiente como por ser un defensor de la libertad indivi-dual Auacuten siendo un representante de la iglesia Catoacutelica tuvo como se sabe que sufrir sus criacuteticas y el rechazo a la exposicioacuten de sus ideas escritos y traducciones biacuteblicas Fray Luis en su obra La perfecta casada deja clara su idea sobre la mujer y la funcioacuten que eacutesta debiacutea ocupar en la sociedad que le tocoacute vivir Para Fray Luis la mujer no era una imagen idealizada del laquoamor corteacutesraquo como la de los escritores neoplatoacutenicos sino un ser de carne y hueso con derechos y responsabilidades en la sociedad de igual manera que el hombre (McKendric 10)

Seriacutea exagerado afirmar que Fray Luis de Leoacuten pone a la mujer por encima del hom-bre en el contexto social Sin embargo y siempre teniendo en cuenta las limitaciones a

142 JUAN FRANCISCO MAURA

las que su profesioacuten y su tiempo le obligaban procura dejar claro que la mujer (casada) merece todo el respeto y ayuda que sea posible de su marido

Porque aunque es verdad que la naturaleza y estado pone obligacioacuten en la casada como decimos de mirar por su casa y de alegrar y des-cuidar continuamente a su marido de la cual ninguna mala condicioacuten de eacutel la desobliga pero no por eso han de pensar que ellos tienen licencia para serles leones y para hacerlas esclavas antes como en todo lo de-maacutes es la cabeza el hombre asiacute todo este trato amoroso y honroso ha de ser principio del marido Porque ha de entender que es compantildeera suya o por mejor decir parte de su cuerpo (Fray Luis de Leoacuten 21 cap 3)

En el reciente estudio de Mar Martiacutenez Goacutengora Discursos sobre la mujer en el Huma-nismo renacentista espantildeol se presenta esa posicioacuten ambigua del fraile agustino en refe-rencia a la funcioacuten de la mujer en la sociedad renacentista

Fray Luis se opone a la funcioacuten otorgada en la eacutepoca a la mujer de mera imagen pasiva Sin embargo fray Luis totalmente encardinado en la cultura del Renacimiento es consciente de la imposibilidad de ignorar ciertos presupuestos De ahiacute la frecuencia en la que el autor anima a las mujeres a buscar una laquofamaraquo puacuteblica que soacutelo una voz masculina puede proveerles Si la mujer desempentildea perfectamente su funcioacuten de casada el marido recibiraacute honra haciendo posible para ella ser alabada por los miembros de la comunidad (187)

Ya se ha mencionado a Isabel la Catoacutelica como impulsora de toda la empresa ultra-marina pero es precisamente gracias a su influencia cuando se pone de moda entre di-versas damas de su tiempo mdashsiglos XV y XVImdash la praacutectica de ciertos estudios y ciencias Beatriz Galindo conocida popularmente como laquoLa latinaraquo fue la que ensentildeoacute latiacuten a la reina Isabel Dice Juliaacuten Juderiacuteas en su obra La Leyenda Negra laquoA los hombres se unen las mujeres en este afaacuten de saber y vemos a Dontildea Beatriz Galindo maestra de latiacuten de la Reina a dontildea Luciacutea de Medrano que explicoacute los claacutesicos en Salamanca a dontildea Fran-cisca de Lebrija que desempentildeoacute una caacutetedra de retoacuterica en la Universidad de Alcalaacuteraquo (Juderiacuteas 74)

Nos cuenta Eustaquio Fernaacutendez de Navarrete que a la muerte del ceacutelebre Antonio de Nebrija quien a impulsos de la reina catoacutelica publicase la primera gramaacutetica europea en lengua romance su hija Antonia le supliacutea en las clases de filosofiacutea y retoacuterica en la Uni-versidad de Alcalaacute cuando eacuteste se encontraba ya viejo y enfermo (xcvi)

No existe ninguna razoacuten para pensar que las las mujeres de clases maacutes favorecidas que pasaron al Nuevo Mundo no disfrutaran de los mismos beneficios y libertades que sus homoacutelogas peninsulares Seraacute preciacutesamente uno de los hijos del mismo Antonio de Nebrija el doctor Sancho de Lebrija quien se encargue de dar poder a Antoacuten Pareja sastre para que la obra escrita de su padre tanto en latiacuten como en romance se distri-buya y venda laquoasiacute en Indias como en otras partesraquo (AHPS Libro del antildeo 1536 Oficio IV Fragmento de un libro Escribaniacutea Cristoacutebal Becerra Folio Primer tercio del legajo Fe-cha 31 de diciembre) En cuanto a las clases menos favorecidas la monarquiacutea espantildeola se preocupoacute desde un primer momento de alfabetizar a todos sus suacutebditos hembras y varones incluyendo los naturales de los territorios conquistados

143ESPANtildeOLAS DE ULTRAMAR EN LA HISTORIA Y EN LA LITERATURA

La educacioacuten de los indiacutegenas americanos fue una sincera preocupa-cioacuten de los reyes de Espantildea casi desde el descubrimiento del Nuevo Mundo Entre las primeras instrucciones de los Reyes Catoacutelicos a sus gobernadores de las Islas Antillas figuran las dadas a Nicolaacutes de Ovan-do en 1503 ordenaacutendole levantar en cada pueblo una escuela junto a la iglesia laquoen la que todos los nintildeos que hubiere en cada una de dichas poblaciones se junten dos veces al diacutea para que alliacute el capellaacuten les ensentildee a leer y a escribirraquo (Vega 9-10)

En la obra renacentista de Cristoacutebal de Villaloacuten El Crotaloacuten se ofrecen unas imaacutegenes muy graacuteficas de las mujeres de la eacutepoca y del laquoexceso de libertadraquo que seguacuten el autor en boca de uno de sus personajes disfrutaban Desde el punto de vista antropoloacutegico y social las siguientes liacuteneas ofrecen una buena imagen de la apariencia fiacutesica de las mujeres de su tiempo y de su actitud vista desde la perspectiva parcial del personaje de la obra

Pues aun no pienses Demophon que la vanidad y perdicioacuten destas livianas mujeres se le ha de pasar a Dios sin castigo que yo te oso afirmar por cosa muy cierta y que no faltaraacute Que por ver Dios su disolucioacuten desenvoltura desverguumlenza y poco recogimiento que en ellas en este tiempo hay visto que asiacute viacutergenes como casadas viudas y solteras todas por un comuacuten viven muy suelta y muy disolutas en su mirar andar y meneo muy curiosas y que por la calle van con un cu-rioso paso en su andar descubierta su cabeza y cabello con grandes y deshonestas crenchas muy alto y estirado el cuello guintildeando con los ojos a todos cuantos topan haciendo con sus cuerpos lascivos meneos (Villaloacuten 860-61 vol 2 canto 20)

El pasaje antes citado pese a parecer humoriacutestico en nuestros diacuteas no lo era tanto en la eacutepoca en que fue escrito ya que la visioacuten de la mujer como parte integrante del pa-trimonio del padre o del marido podiacutea de alguna manera poner en juego laquola honraraquo de su posesor Pese a esto se aprecia como la mujer teniacutea cierto margen de libertad que no se limitaba a las caacutemaras de un convento o a una vida totalmente alejada del mundanal ruido En la siguiente cita continuacioacuten de la anterior se puede observar la serie de ac-cesorios y aderezos que las mujeres de la eacutepoca utilizaban en sus vestidos y cuerpos llamando la atencioacuten la complejidad y sofisticacioacuten de los atuendos descritos

Por esta su comuacuten deshonestidad se cierto que vendraacute tiempo en el cual ha de hacer Dios un gran castigo en ellas pelarse han todos sus cabellos hacieacutendolas a todas calvas y seraacute tiempo en que les quitaraacute Dios todos sus joyeles sortijas manillas zarcillos collares ajorcas y apretadores de cabeza Quitarles ha los partidores de crenchas tenaci-cas salsericas redomillas y platericos de colores y todo geacutenero de afei-tes sahumerios guantes adobados sebos y unturas de manos y otros olores Alfileres agujas prendedores Quitarles ha las camisas muy del-gadas y los manteos vasquintildeas briales saboyanas nazarenas y rebo-cinos y en lugar de aquellos sus cabellos encrespados y enrifados les daraacute pelambre y calvez y en lugar de aquellos apretadores y joyeles

144 JUAN FRANCISCO MAURA

que les cuelgan de la frente les daraacute dolor de cabeza y por cinta de ca-deras de oro muy esmaltadas y labradas les daraacute sogas de muy aacutespero esparto con que se cintildean y aprieten y por aquellos sus muy curiosos y suntuosos ataviacuteos de su cuerpo les daraacute siacutelici y desta manera haraacute Dios que lloren su lascivia y desorden y que de su lujuria y deshonestidad hagan grave penitencia Entonces no habraacute quien las quiera por su he-diondez y miseria en tanto que siete mujeres se encomendaran a un varoacuten y eacutel de todas huiraacute menospreciaacutendolas y aborrecieacutendolas como de gran mal (Villaloacuten 860-61 vol 2 canto 20)

Excelente lista de aderezos femeninos de los cuales pocos son reconocibles en nues-tros diacuteas Gran frustracioacuten debiacutea de tener con las mujeres el autor de estas liacuteneas sien-do al parecer muy poco correspondido por estas uacuteltimas La misoginia que aparece en estas liacuteneas refleja cierta ingenuidad La mujer que se nos presenta debioacute de ser bastante atractiva y sofisticada portando una gran variedad de adornos muchos de ellos de origen oriental y de perfumes que poco tendriacutean que envidiar a los de la mujer moderna En Descripcioacuten breve de toda la tierra del Peruacute Tucumaacuten Riacuteo de la Plata y Chile obra escrita en Chile entre 1603 y 1609 por el padre Reginaldo de Lizarraga nacido en Medelliacuten (Espantildea) en 1545 y trasladado a Ameacuterica a los quince antildeos vemos una asombrosa semejanza con la cita anterior En esta obra del padre dominico dedicada al entonces presidente del Consejo de Indias conde de Lemos observamos coacutemo su descripcioacuten de la vestimenta de las mujeres de Lima ofrece notables semejanzas con la escrita unos antildeos antes en Espantildea En su capiacutetulo 51 titulado laquoDe los vestidos de las mujeresraquo dice lo siguiente

Lo que en esta ciudad [Lima] se admira mucho y aun lo que se ha-biacutea de refrenar es los vestidos y trajes de las mujeres son en esto tan costosas que casi no se sabe como lo pueden sufrir sus maridos La soberbia de ellas es demasiada y no sabemos en lo que han de venir a parar plegue a Dios y no sea en lo que pararon aquellas de quien dice Nuestro Sentildeor Porque las hijas de Sioacuten se ensoberbecieron (esto es las ciudadanas) cuando saliacutean de sus casas llevaban las gargantas ex-tendidas los ojos altos a una y otra parte guintildeaacutendolos los pasos muy compuestos el Sentildeor las volveraacute calvas y les raeraacute los cabellos de sus cabezas les quitaraacute sus chapines y jerbillas bordadas las medias lunas rodetes las cadenas y collares de oro las ajorcas los tocados costosos los punzones de oro para partir las crenchas los zarcillos y los olores los anillos y piedras preciosas etc y por los olores seles daraacute muy pes-tilencial olor y por las cintas de oro sogas de esparto etc No creo yo hay en lo descubierto del mundo ciudad en su tanto ni cuatro veces mayor que a tanta soberbia en este particular como esta nuestra ciu-dad [Lima] llegue acueacuterdome que los antildeos pasados maacutes ha de treinta y ocho que llegando un religioso nuestro de Espantildea nacido y criado en Toledo a nuestro convento de esta ciudad cerca de la fiesta de Cor-pus Christi tratando de ella y de la suntuosidad majestad y riqueza que aquel diacutea en Toledo en calles y ventanas se mostraba le deciacuteamos que no nos espantase porque en nuestra ciudad veriacutea coacutemo no le ha-

145ESPANtildeOLAS DE ULTRAMAR EN LA HISTORIA Y EN LA LITERATURA

ciacutea mucha ventaja Toledo Llegoacute la fiesta vio la riqueza que se mostroacute en los vestidos de las mujeres adornos de ventanas altares y calles dijo que la riqueza de Toledo en este diacutea mostrada no haciacutea muchas ventajas a la de esta ciudad Pues es cierto que hay tanta diferencia de entonces ahora en lo que vamos tratando como de vestidos de aldea a vestidos de corte con justo tiacutetulo se podriacutea moderar por los virreyes esta soberbia pero no seacute por queacute no se modera y siacute seacute por queacute ni los maridos no tienen aacutenimo para moderarlo ni los gobernadores tampo-co (Lizarraga 38 lib 1 cap 51)

Seriacutea injusto y exagerado afirmar que los descubrimientos transoceaacutenicos se hicieron por la presioacuten que ejercieron las mujeres sobre sus amantes para que estos les trajesen laquomaacutes raacutepidamenteraquo todo ese laquosin finraquo de delicadezas exoacuteticas de todo tipo que existiacutean en el Oriente Lo que siacute es cierto es que las mujeres fueron grandes consumidoras de perfumes afeites sedas joyas y otros bienes suntuarios siendo muy conscientes de lo que hoy entendemos como laquomodaraquo Martiacuten Fernaacutendez de Navarrete en su indispensa-ble trabajo sobre los primeros viajes transoceaacutenicos Coleccioacuten de los viajes y descubrimien-tos menciona de paso la situacioacuten de algunas mujeres durante el siglo XV Es precisa-mente esta eacutepoca en la cual portugueses y castellanos entran en conflicto por el control de algunas posesiones en las costas africanas

y crecioacute el lujo a tal extremo que aun las mujeres de los menestrales y artesanos se confundiacutean en los vestidos con las de alto linaje y esta-do usando ropas de ricas telas de seda de oro de lana con forros de martas y pieles y con guarniciones de oro plata y aljoacutefar cuyo gasto por ser ruina de las familias se tratoacute de corregir aunque sin efecto en las Cortes de Palenzuela (M Fernaacutendez de Navarrete 75 21)

El mismo autor resalta la importancia que tuvo para el comercio de Castilla el contar con una buena armada que protegiese a los barcos de piratas y otros peligros Gracias a los inventarios que se han conservado del duque de Beacutejar y de don Alvaro de Zuacutentildeiga conocemos el lujo de estos sentildeores en perlas orientales piedras preciosas telas y demaacutes utensilios de gran valor134 Existe una Real Pragmaacutetica de Fernando el Catoacutelico a Diego Coloacuten en donde aparece nuevamente la conciencia que se teniacutea sobre la manera de ves-tir que deberiacutean llevar las damas castellanas

R PRAGMAacuteTICA SOBRE EL VESTIR Y GASTAR SEDA EN LAS IN-DIAS Valladolid 12 de noviembre de 1509 Don Fernando etc A vos Don Diego Coloacuten nuestro Almirante y Gobernador de las Indias del mar Oceacuteano y a otro cualquier mi Gobernador etc Sepades que yo he sido informado de los muchos gastos y costas que se han hecho y facen y se esperan hacer si yo no lo mando proveer y remediar en el vestir y gastar de las sedas y brocados y bordados en la Isla Espantildeola y en las otras islas y poblaciones de las dichas islas del mar Oceacuteano tra-yendo en ello mucho desorden y yo por el amor y voluntad que tengo

134 AGI Indiferente 418 Libro 2 fol 87v Publicada en DH Am Tom 6 paacutegina 191 DIA Tomo 31 pag 470 DIU Tomo 5 paacuteg 166 Seguacuten la RC a Diego Coloacuten fechada a 14 de noviembre de 1509 es la pragmaacute-tica que se guarda en Castilla sobre la manera de vestir (DIU Tomo 5 paacutegina 174)

146 JUAN FRANCISCO MAURA

a esas dichas Indias y a los pobladores dellas y porque deseo que ellas se aumenten y acrecienten por las haber ganado y descubierto por la gracia de Nuestro Sentildeor con nuestra industria trabajo y costa y los po-bladores dellas no hagan sobre lo suso dicho tan excesivos gastos sino pues que van a ellas con deseo y voluntad de se ayudar y aprovechar del oro que por gracia de Nuestro Sentildeor se descubre de cada diacutea se detengan en lo gastar en semejantes cosas para se aprovechar dellos en otras cosas que maacutes les convenga asiacute para sus personas como para sus haciendas y por evitar y excusar lo suso dicho mandeacute lo platicar con algunos de mi Consejo y por ellos visto se halloacute que porque nuestros suacutebditos y naturales que viven y estaacuten en dichas Indias no gasten sus haciendas en semejantes desoacuterdenes y que las conserven y guarden pa-ra sus menesteres y por el bien y el pro comuacuten de todos generalmente mando dar esta mi carta premaacutetica sancioacuten la cual quiero y mando que haya fuerza y vigor de ley bien ansiacute y a tan cumplidamente como si fuese fecha y promulgada en Cortes por lo cual ordeno y mando que en cuanto a mi merced y voluntad fuere ninguna ni algunas personas de cualquier ley estado condicioacuten que sean que estuvieren de morada o vivienda o en otra cualquier manera en la dicha Isla Espantildeola y en las otras islas desas dichas Indias y tierra firme no puedan traer y traigan ropa alguna de brocado ni de seda ni de chamelote de seda ni zarzahaacuten ni tercenel ni tafetaacuten ni vainas ni correas de espada ni en cinchas ni en sillas ni en alcorques ni en cosa alguna ni tampoco puedan traer ni trai-gan bordados de seda ni chapado de plata ni de oro de martillo ni fila-do ni tejido ni de otra cualquier manera pero que las personas que tu-vieren en las dichas Indias bienes asiacute muebles como raiacuteces que valgan hasta la cuantiacutea de mil castellanos que ellos y los hijos que tuvieren de hasta edad de catorce antildeos traigan jubones y caperuzas y bolsas y ribe-tes y pestantildeas de seda de cualquier color que quisieren con tanto que en una ropa no traigan maacutes de un ribete y que no haya en los dichos ribetes y pestantildeas maacutes anchura de cuanto un dedo pulgar y que no se traiga en los ruedos de las ropas y que puedan traer becas de tercenel y de tafetaacuten y de papahigos de camino aforrados en el mismo tercenel y tafetaacuten y ansiacute mismo permitimos que puedan traer de seda las cora-zas y guarnecer las faldas y gocetes y capacetes y baberas y quejotes y traer cojines de seda en la silla de la jineta y que las mujeres de las tales personas que tuviesen bienes en la dicha cuantiacutea de los dichos mil castellanos y sus hijas siendo doncellas puedan traer gonetes y corseacutes y fajas de dos varas de largo de seda y [borradas dos letras por mancha de tinta] mas y de lo de vestir y mudar cuando quisieren y por bien tuvieren quier sea moyil o faldilla o cota o haacutebito u otra cualquier ropa con tanto que juntamente no puedan vestir ni vistan maacutes de una ni les pongan trepas ni tiras de seda ni de brocado ni de oro tirado ni tejido ni relido ni en las ropas de pantildeo pongan cortapisas ni lisonjas ni trepas ni tiras ni otra guarnicioacuten alguna de seda ni de brocado salvo que puedan traer un ribete o pestantildea de seda de anchura de un dedo pulgar asiacute en

147ESPANtildeOLAS DE ULTRAMAR EN LA HISTORIA Y EN LA LITERATURA

las ropas de seda como en las de pantildeo en los ruedos de las faldas y para las costuras y no otra cosa alguna y que no traigan la dicha seda en las guarniciones de las mulas ni en angarillas ni en sillas ni en pantildeos ni en otra cosa alguna y que ansiacute mismo no puedan traer mantillas de seda ni enforradas en seda sopena que l que contrario hiciere pierda las ro-pas que ansiacute trujere vestidas por primera vez y sea repartido la mitad para el juez que lo juzgare y la otra mitad para el juez que lo acusare y por la segunda que pierda la ropa y se parta como dicho es y sean desterrados de la isla donde viviere para dos antildeos y por cuanto algu-nas personas de los que nuevamente destos reinos de Castillaa van a se avecindar y poblar y estar en las dichas Indias y son de honra acae-ce que no llevan tantos bienes que valgan la dicha cuantiacutea de los mil castellanos que mando que tengan los que hubieren de traer seda en la manera que dicha es que a eacutestos tales no se entienda y extienda lo suso dicho y que puedan traer la dicha seda seguacuten y en la manera que dicha es y no maacutes hasta tanto que haya un antildeo que estaacuten en las dichas Indias que corra y se cuente desde el diacutea que llegare fasta ser cumplido y que siacute cumplido no tuviere bienes que valgan la dicha cuantiacutea de los dichos mil castellanos que no puedan traer seda ninguna so la dicha pena de suso contenida la cual mando a vos las dichas nuestras justi-cias y a cada una de vos que esta mi carta y todo lo en ella contenido y cada cosa y parte dello guardeacuteis y cumplaacuteis y ejecuteacuteis por manera que se cumpla y ejecute lo en ella contenido so pena de perdimiento de los oficios y que seades inhaacutebiles para haber otros semejantes y que pagueis la estimacioacuten de la tal ropa que dejardes de ejecutar y para que lo susodicho sea notorio y ninguno dello pueda pretender ignorancia mando que esta mi carta sea pregonada puacuteblicamente por las plazas y mercados y otros lugares acostumbrados desas dichas islas por prego-nero y ante escribano puacuteblico(Konetzke Coleccioacuten 23)135

Tambieacuten se sabe de las joyas que Rodrigo Ponce de Leoacuten marqueacutes de Caacutediz debioacute dar a dontildea Beatriz Pacheco (M Fernaacutendez de Navarrete 75 22) Lo que siacute queda claro es que la navegacioacuten seraacute a partir de estos antildeos la forma maacutes raacutepida e importante para comerciar con aquellos paiacuteses de Oriente que antes soacutelo era posible alcanzar a traveacutes de rutas terrestres Existe un documento muy representativo de este periodo sobre la posesioacuten de joyas de gran valor por parte de miembros de una de las familias maacutes repre-sentativas residentes en Ameacuterica Los protagonistas son en este caso el almirante Diego Coloacuten y su mujer Mariacutea de Toledo Dice el documento que El jurado Antoacuten Bernal y Juana de Hoces su mujer vecinos de Sevilla en la collacioacuten de Santa Cruz reciben de Diego Coloacuten Almirante de las Indias laquoun joyel muy rico de oro de hechura de escudo que tiene en medio una piedra preciosa grande esmeralda e debaxo de la dicha piedra un rostro de aacutengel labrado en el mismo oro esmaltado e a cada lado del dicho rostro una piedra preciosa diamante pura y debaxo una piedra gruesa pendiente que pesa el dicho

135 AGI Indiferente 418 Libro 2 fol 87v Publicada en DH Am Tom 6 paacutegina 191 DIA Tomo 31 pag 470 DIU Tomo 5 paacuteg 166 Seguacuten la RC a Diego Coloacuten fechada a 14 de noviembre de 1509 es la pragmaacutetica que se guarda en Castilla sobre la manera de vestir (DIU Tomo 5 paacutegina 174)

148 JUAN FRANCISCO MAURA

joyel con todo lo susodicho medio marcoraquo Los citados Antoacuten Bernal y su esposa se dan por pagados de todo lo que se les adeudaba y se obligan a su vez a devolver el joyel al Almirante si este les paga en dinero El 23 de agosto de 1530 siete antildeos despueacutes la virreina canceloacute la anterior obligacioacuten y recuperoacute el mencionado joyel (AHPS Libro del antildeo 1523 Oficio I Escribaniacutea Alonso de la Barrera Folio 1173 Fecha 3 de diciembre) En la misma casa del almirante otra mujer Briolanga Muntildeiz su tiacutea materna se obliga a pagar al mercader genoveacutes Batista Catantildeo 22 ducados de oro laquopor cierto raso que le comproacute y habiacutea de ser pagado en el puerto de Santo Domingoraquo (AHPS Libro del antildeo 1509 Oficio V Libro uacutenico Escribaniacutea Francisco Esquibel Folio Primer tercio del lega-jo Fecha 9 de marzo) Dontildea Briolanga recibiacutea cada antildeo para su mantenimiento 100000 maravediacutes del almirante mayor de las Indias por medio de Gaspar Gurricio monje del monasterio de Santa Mariacutea de las Cuevas (AHPS Libro 1510 Oficio XV Libro II Es-cribaniacutea Bernal Gonzaacutelez Vallesillo Folio primer tercio del legajo Fecha 4 de julio) Resulta interesante hacer notar la temprana presencia (1516) de un ingleacutes en Santo Domingo involucrado igualmente en la compra de telas Se trata de laquoNicolas Arnoteraquo residente en Santo Domingo que debe pagar a Mariacutea Caldera mujer del comendador Diego Barbosa el valor de una cama de sargas de colores de Flandes (AHPS Libro del antildeo 1516 Oficio XV Libro II Escribaniacutea Bernal Gonzaacutelez Vallesillo Folio Primer tercio del legajo Fecha 28 de agosto) Sin embargo anteriormente a esa fecha (1514) encontramos a un veneciano casado con una inglesa mucho maacutes ceacutelebre en sus viajes trasoceaacutenicos laquoSevastiaacuten Cavotoraquo capitaacuten del rey don Fernando y vecino de Sevilla136

De forma paralela se observa tambieacuten un cierto desenvolvimiento de la mujer en su medio lo que equivaliacutea a intercambios de informacioacuten a todos los niveles incluyendo por lo tanto el cultural No era extrantildeo que tuviesen libros de comedias a mano y que llegasen incluso a escribir comedias ellas mismas Efectivamente la sospecha de que las damas llegasen a escribir comedias estaba bien fundada Veacuteanse algunos ejemplos Ana Caro Malleacuten de Soto una de las maacutes famosas dramaturgas de la Sevilla del siglo XVII autora de El conde de Partinupleacutes utiliza el tema del amor en sus maacutes diversas variantes fiacutesicas y espirituales como el eje de casi todas sus obras (Perry 57) Este hecho por otra parte indica el favor del puacuteblico ante un tema tan popular Veacutease otro ejemplo

The drama of this period did not present love and marriage as a simple partnership however and many dramatists contrasted laquoprofaneraquo with laquohonestraquo love Feliciana Enriacutequez de Guzmaacuten who wrote Tragicome-dia Los jardines y campos sabeos in Seville in the early seventeenth cen-tury presented the hero Clarisel as the victim of laquopervertedraquo and fickle Belidiana in part 1 so blinded by her beauty that he feels himself laquoin shackles and in chainsraquo (Perry 57)

Pero las damas espantildeolas de esta eacutepoca no soacutelo escribiacutean comedias algunas tambieacuten se aventuraron a escribir tratados cientiacuteficos Uno de estos casos fue el de Oliva Sabu-co de Nantes Barrera que a finales del siglo xvi escribioacute un tratado meacutedico sobre la naturaleza humana advirtiendo que la lujuria podiacutea perjudicar al cuerpo Se basaba en

136 Sebastiaacuten Caboto o laquoSevastiaacuten Cavotoraquo estaba casado con Juana Cavoto vecina que fue de la ciudad de Londres en la parroquia de San Gil (AHPS Libro del antildeo 1514 Oficio I Libro II Escribaniacutea Mateo de la Cuadra Folio 253 Fecha 14 de Septiembre) citado en CFAAPS Vol 3 doc 128 p 37

149ESPANtildeOLAS DE ULTRAMAR EN LA HISTORIA Y EN LA LITERATURA

la presuncioacuten de que la lujuria provocaba que el cerebro emitiese un liacutequido que iba al estoacutemago enfriaacutendolo y debilitaacutendolo interrumpiendo de esta manera las funciones vitales (Perry 58)

Se sabe que en la eacutepoca de Isabel la Catoacutelica habiacutea muchas mujeres estudiantes y que la propia reina las impulsaba a estos menesteres iniciativa que obtuvo sus frutos en las deacutecadas siguientes Ademaacutes de las conocidas novelistas Mariacutea de Zayas y Sotomayor y dontildea Mariana de Carvajal existioacute toda una serie de escritoras de todos los geacuteneros lite-rarios que florecieron a ambos lados del Atlaacutentico y que no solamente llaman la aten-cioacuten por su nuacutemero sino por la calidad de sus obras Algunas de ellas como dontildea Luisa de Padilla condesa de Aranda calificada por Serrano y Sanz como laquola maacutes notable de cuantas florecieron en Espantildea en el siglo XVIIraquo personificaraacuten a la perfeccioacuten a este tipo de mujeres Tambieacuten deberiacuteamos saber cuaacutentas seriacutean las mujeres que escribieron con pseudoacutenimos masculinos

La informacioacuten sobre las diferentes facetas de la vida femenil con que contamos no es abundante A pesar de todo podemos hacernos una idea maacutes clara de la verdadera situacioacuten de la mujer a traveacutes de una nueva interpretacioacuten de los textos tanto de los medievales como de las croacutenicas de los primeros antildeos del descubrimiento y conquista Algunos estudios relativamente recientes surgidos por el intereacutes general que suscita todo lo concerniente a la mujer han ayudado a considerar nuevas perspectivas La eru-dicioacuten moderna estaacute poniendo en tela de jucio los estereotipos tradicionales en cuanto a la pasividad y relevancia femeninas asiacute como al tradicional misogenismo que se atri-buye a la eacutepoca medieval Cada vez estaacute maacutes claro que la existencia de estas mujeres variaba considerablemente seguacuten la eacutepoca posicioacuten social o situacioacuten geograacutefica por lo que hacer valoraciones categoacutericas sobre laquola situacioacuten de la mujerraquo puede llevar a graves equivocaciones (Dillard 9) Es fundamental para comprender a la mujer espa-ntildeola que pasoacute al Nuevo Mundo tener en cuenta las enormes diferencias de todo tipo que existieron en la sociedad castellana y novomundista Un pintoresco ejemplo es el de laquolas tapadasraquo una usanza de origen aacuterabe que se pondriacutea de moda en Castilla poco despueacutes de la toma de Granada por los Reyes Catoacutelicos y que despueacutes pasariacutea al Peruacute Esta tradicioacuten ha perdurado en algunos pueblos de Espantildea hasta relativamente poco tiempo pueblos como Mojaacutecar (Almeriacutea) y Vejer de la Frontera (Caacutediz) son ejemplo de esta costumbre tambieacuten conocida como el de las laquocobijaacutesraquo

Tras la caiacuteda del reino musulmaacuten de Granada en 1492 la corona espa-ntildeola prohibioacute a las mujeres aacuterabes de Andaluciacutea vestir los velos islaacutemi-cos que cubriacutean sus rostros y ocultaban su identidad No era faacutecil des-arraigar esta costumbre tan ancestral y secular y el emperador Carlos asiacute como su hijo el rey Felipe II tuvieron que repetir la prohibicioacuten Cuando finalmente las moras fueron obligadas a abandonar sus velos y a adoptar el chal castellano comenzaron a utilizar la nueva prenda para cubrir sus rostros dejando al descubierto soacutelo uno de los ojos Esta nueva moda en el uso del chal tradicional nos asegura leoacuten Pi-nelo era extremadamente graciosa sensual y atractiva a causa de la belleza exoacutetica de los ojos de las moras Las mujeres cristianas de Granada Coacuterdoba y Sevilla imitaron pronto la nueva moda de llevar el chal y asiacute nacioacute la laquotapadaraquo hispana Desde Sevilla la nueva moda

150 JUAN FRANCISCO MAURA

fue a las colonias de ultramar y tomoacute raices especialmente en el Peruacute (Martiacuten 317-18)

En un reciente estudio sobre la educacioacuten de la mujer en la Ameacuterica virreinal apare-cen algunos ejemplos significativos de mujeres espantildeolas que consagraron gran parte de sus vidas a la tarea docente Dentro del proceso educativo de las espantildeolas que fueron a las Indias destaca el papel de dontildea Catalina de Bustamante Joseacute de Jesuacutes Vega y Ma-riacutea Luisa Caacuterdenas de Vega dicen en su obra Ameacuterica Virreinal La Educacioacuten de la mujer que esta mujer pocos antildeos despueacutes del descubrimiento del Nuevo Mundo se dedicoacute a trabajar en favor de los indios aunque por desgracia su nombre y sus hechos en la labor docente hayan sido ignorados por los historiadores modernos (Vega 12-13)

Son varias las veces que se nombra a Catalina de Bustamante en el citado estudio y varias las fuentes antiguas en que se recoge la presencia de tan distinguida laquomatrona muy honrada y de buen ejemploraquo de la que ya hablaba Zumaacuterraga y sobre la que se hizo un informe enviado a Carlos V describiendo sus actividades en la Nueva Espantildea firmado por cuatro de los misioneros maacutes conocidos de Meacutexico

El informe dice que los franciscanos de Texcoco acababan de cons-truir un nuevo monasterio y cedido el antiguo A una honrada y honesta y muy virtuosa matrona que se dice Catalina de Bustamante para que ende instruyese a las hijas de los sentildeores de la comarcala cual con el favor de Dios y limosnas que don Hernando [Corteacutes] les haciacutea para su sustentacioacuten [teniacutea en esa casa-hogar] hasta trescientas mujeres antes maacutes que menos (Vega 14)

Estas laquocasas-hogarraquo no estaban regentadas necesariamente por monjas sino por lo que llamaban laquobeatasraquo mujeres que sin estar estar sujetas a la autoridad eclesiaacutestica se dedicaban a un laquolucro honestoraquo Llamadas tambieacuten laquobeateriosraquo eran diferentes a los conventos de monjas y constituiacutean las primeras escuelas de la mujer en la Nueva Espa-ntildea (Vega 20-21) Fue gracias al ejemplo de mujeres como Catalina de Bustamante que dedicaron sus vidas a la educacioacuten de los indiacutegenas que existiesen otras continuando su ejemplo Motoliniacutea dice claramente que laquode ese primer encerramiento (el de Texcoco regentado por Catalina) salieron otras honestas y muy virtuosas duentildeas que ensentildeaban a las maacutes menudasraquo (Vega 23)

Pero dontildea Catalina de Bustamante pese a ser una singular mujer y la iniciadora de la educacioacuten de la mujer en Meacutexico no fue un caso aislado corresponde maacutes bien a un patroacuten al que se ajustaron muchas de las pioneras de la Nueva Espantildea que sembraron instituciones de educacioacuten de la mujer En 1530 unos antildeos maacutes tarde aparecioacute una de las grandes protectoras de la instruccioacuten femenina en Ameacuterica La emperatriz Isabel de Portugal (Vega 24)

Desde comienzos de la conquista fueron varios los centros docentes regentados por mujeres en los que la ensentildeanza no estaba impartida por monjas Una de las institucio-nes maacutes sobresalientes del sistema educativo fue el Colegio de Nintildeas que se establecioacute en la ciudad de Meacutexico a principios del siglo XVI con maestras que no eran monjas Estas seglares conocidas comunmente como laquomigasraquo eran las descendientes de las antiguas beatas Su ubicacioacuten permanente fue determinada en 1548 lugar que serviriacutea de escue-la ininterrumpidamente hasta 1862 cuando el edificio fue convertido en bodega (Vega 60) No se debe perder de vista que no soacutelo por el hecho de llevar una vida secular se

151ESPANtildeOLAS DE ULTRAMAR EN LA HISTORIA Y EN LA LITERATURA

gozaba de maacutes privilegios Era maacutes bien al contrario En las carreteras las mujeres segla-res no inspiraban el mismo respeto que las monjas que ademaacutes teniacutean contacto cons-tante con personas de los dos sexos no pertenecientes a la Iglesia (Arenal 297) Ademaacutes dentro de las murallas del convento desapareciacutean muchas de las barreras sociales que limitaban a la mujer de esta eacutepoca

La presencia femenina y la monarquiacutea

Pues iquestcoacutemo sabes tuacute preguntoacute don Quijote que los grandes llevan detraacutes de siacute a sus caballerizos Yo seacute lo direacute respondioacute Sancho Los antildeos pasados es-tuve un mes en la corte y alliacute vi que paseaacutendose un se-ntildeor muy pequentildeo que deciacutean que era muy grande un hombre le seguiacutea a caballo a todas las vueltas que daba que no pareciacutea que era su rabo Pregunteacute que coacutemo aquel hombre no se juntaba con el otro sino que siempre anda-ba tras deacutel Respondieacuterome que era su caballerizo y que era uso de grandes llevar tras siacute a los tales Desde enton-ces lo seacute tan bien que nunca se me ha olvidado (Cervan-tes Don Quijote)

Los monarcas espantildeoles fueron conscientes de que sin la presencia femenina difiacute-cilmente se podriacutea solidificar una conquista a todos los niveles La mayor parte de los virreyes y altos cargos trajeron a sus mujeres con ellos y en las ciudades principales de Hispano-Ameacuterica como la ciudad de Meacutexico Guatemala Lima o Potosiacute habiacutea mujeres que disfrutaban de una esmerada educacioacuten (gramaacutetica latiacuten poesiacutea historia muacutesica) Esto dariacutea origen a una elegante y hasta cierto punto sofisticada sociedad en la que las mujeres tomaron parte en asuntos maacutes importantes que los que sus homoacutelogas toma-ran en las colonias portuguesas laquoThere were brilliant vice-regal courts at Mexico City and Lima far exceeding anything that could be found in Portuguese or English America during the seventeenth centuryraquo (Boxer 39) Las estadiacutesticas con las que contamos hoy no soacutelo demuestran que las mujeres llegaron al Nuevo Mundo en respetables porcen-tajes sino que ademaacutes tuvieron una participacioacuten activa llegando a intervenir en algu-nos casos en las liacuteneas de vanguardia Resulta difiacutecil aproximarse al estado de aacutenimo de aquellas mujeres que vivieron en eacutepocas tan lejanas Para ello es necesario indagar en los documentos de la eacutepoca para lograr rescatar del pasado todos esos tesoros de la historia muchas veces tergiversados y manipulados con el fin de que sirvan a propoacutesi-tos actuales Es en los viejos manuscritos donde queda testimoniada su presencia tan rica en dolores tragedias y por queacute no en amores Fue la llegada de estas mujeres una brisa de esperanza y de ilusioacuten para aquellos que ya estaban en las tierras de ultramar y

152 JUAN FRANCISCO MAURA

veiacutean venir de su propia tierra aquello que maacutes antildeoraban amantes madres hermanas Un haacutelito de vida y poesiacutea que suavizaba las costumbres de estos rudos y romaacutenticos pioneros laquoporque para ser hombres de tales empresas algo de romaacutentico debioacute de existir en ellos y que es tan propio del espantildeol y abandonariacutean en brazos tan gentiles sus bruscos modales que habiacutean adquirido en aacutespero contacto en selvas y montantildeasraquo (Villafantildee 125)

Hoy sabemos que en la normativa oficial de la Espantildea del siglo XVI y XVII se favoreciacutea el paso de mujeres al Nuevo Mundo Afirmar lo contrario no solamente es falso sino que implica un desconocimiento total de los primeros dos siglos de la colonizacioacuten espantildeola La presencia de estas mujeres espantildeolas fue efectiva laquolas disposiciones al respecto demuestran claramente que se teniacutea especial intereacutes en su arraigo y que se tra-taba de defender su posicioacuten de mujeres casadas con conquistadores y colonizadoresraquo (Villafantildee 126) Los monarcas comprendiacutean que era praacutecticamente imposible que los hombres viviesen sin mujeres y que de ser asiacute era de esperar que se cometiesen abusos con las indias lo que incidiriacutea en la moral social y en el buen gobierno de la colonia Ademaacutes sin un asentamiento definitivo con hogares y familias difiacutecilmente se podriacutea llevar a cabo una presencia permanente en las nuevas colonias (Orsquo Sullivan-Beare 45)

Empezando por los Reyes Catoacutelicos la preocupacioacuten de que en las colonias se esta-bleciesen nuacutecleos que tuviesen como base la familia cristiana fue clara Las capitulacio-nes que a este efecto se hicieron entre los conquistadores y la Corona fueron nume-rosas La efectuada entre Rodrigo de Baacutestidas y Carlos V puede ser un buen ejemplo Fechada en Valladolid el 6 de noviembre de 1524 muestra el propoacutesito de Baacutestidas de establecer una colonia permanente en la desembocadura del riacuteo Magdalena en el terri-torio que hoy vendriacutea a corresponder a Colombia El documento firmado por el Empe-rador comienza asiacute

El Rey Por cuanto por parte de vos Rodrigo de Baacutestidas vecino de la ciudad de Santo Domingo de la Isla Espantildeola Me fueacute fecha relacioacuten que por servicio de la Catholica Reyna Mi Sentildeora e Nuestro os ofre-ceacuteis de poblar e poblariades la provincia e puerto de Santa Marta que en Castilla de Oro llamada la Tierra Firme e que la poblariades dentro de dos antildeos siguientes haciendo en ella un pueblo en que no menos haya en eacutel al presente cincuenta vezinos que los quince de ellos sean casados y tengan consigo a sus mujeres y que lo teniades fecho dentro de dos antildeos y de hoy en adelante lo maacutes que fuese posible asiacute de cris-tianos espantildeoles como de indios (Restrepo 1 30)

De igual manera el priacutencipe Felipe (futuro Felipe II) en las capitulaciones establecidas en 1547 con Juan de Sanabria para que eacuteste fuese como gobernador y capitaacuten general de la dicha provincia escribe lo siguiente laquoPrimeramente que seais obligado e os obligeis a llevar destos Reynos de Castilla a la dicha provincia del Rio de la Plata cien casados con sus mujeres e hijos para poblar la dicha provincia y con ellos llevareis a vuestra muger e hijos (CDI de Ameacuterica y Oceaniacutea 23 119)

En numerosas ocasiones se pone de manifiesto el apoyo de la monarquiacutea a la emigra-cioacuten femenina tantas que difiacutecilmente se podriacutean enumerar todos los casos Lo cierto es que la legislatura vigente favoreciacutea la emigracioacuten y traslado de mujeres con toda una se-

153ESPANtildeOLAS DE ULTRAMAR EN LA HISTORIA Y EN LA LITERATURA

rie de alicientes137 sobre todo si eacutestas estaban casadas pasaje para llevar a las familias franquicia de derecho para los artiacuteculos que portasen consigo favoritismo en cargos destinos y contrataciones a aquellos que pasasen con sus mujeres incluyendo ademaacutes de los castellanos y leoneses a suacutebditos de otras partes de la corona incluso genoveses y portugueses si estos veniacutean acompantildeados de sus consortes (Fernaacutendez Duro 15-16)

Incluso se llegoacute a imponer penas a aquellos hombres casados que no llevasen a sus mujeres con ellos a Indias en el teacutermino de un antildeo El mismo emperador en una ceacutedula otorgada al virrey de la Nueva Espantildea le recomendaba que laquoprocurase persuadir a ca-sarse a los solteros que estuviesen en edad y situacioacuten de hacerloraquo prometieacutendoles que al efectuar el matrimonio seriacutean preferidos en el reparto de indios En la isla de San Juan de Puerto Rico los cargos oficiales y oficios puacuteblicos debiacutean de ser desempentildeados por los casados en primer lugar En Meacutexico ocurrioacute lo mismo con los cargos de corregido-res (Konetzke laquoemigracioacutenraquo 140-41) Felipe II al igual que sus antecesores y sucesores reiteraraacute y justificaraacute los beneficios de los que seraacuten acreedores aquellos que tengan allaacute a sus mujeres laquoque los que han servido en los descubrimientos de las dichas Indias y tambieacuten los que ayudan a la poblacioacuten dellas que tienen allaacute sus mugeres sean preferi-dos en los aprouechamientos qualesquierraquo mandando que despueacutes de los conquistado-res se tuviera en cuenta para la laquoprovisioacuten de los corregimientosraquo a los colonos casados siempre que estuvieran capacitados para dichos cargos (Konetzke laquoemigracioacutenraquo 141)

Las disposiciones en favor del matrimonio son claras ya sea por medio de un favo-ritismo manifiesto como en los casos antes citados o mediante medidas de cohercioacuten para que esta poliacutetica se llevase a cabo Don Sebastiaacuten Ramiacuterez de Fuenleal obispo de Santo Domingo y presidente de la Audiencia de Meacutexico propuso que a aquellos enco-menderos que no estuviesen casados y que no hubiesen tomado parte en la conquista se les quitase los indios concedidos con la obligacioacuten de devolveacuterselos si en el plazo de un antildeo habiacutean contraiacutedo matrimonio (Konetzke laquoemigracioacutenraquo 142-43) Por supuesto hubo excepciones a estas reglas En algunos casos ni la mujer teniacutea especial intereacutes en vivir junto con su marido en las Ameacutericas ni el marido queriacutea ir a buscar a su mujer pasado el plazo de un antildeo En el presente documento y de forma excepcional las auto-ridades reales protegen a los conyuges para que puedan seguir viviendo separados en continentes diferentes

Nuestras justicias de la ysla de Cubagua e otras qualesquier de las nuestras Yndias yslas e tierra firme del mar oceacuteano e a cada uno e qualquier de vos a quieacuten esta mi ceacutedula fuese mostrada por parte de Alonso de Tapia nuestro veedor de la provincia de Paria me ha sido hecha relacioacuten que ha mucho tiempo que reside en esas partes donde nos ha servido en lo que se ha ofrecido e que agora vos otros le apre-miaacuteis a que venga o embiacutee a estos Reinos por su muger lo cual no puede al presente hazer a causa de no ter posibilidad para ello a mi me ha suplicado vos mandase que no le compeliacuteesedes ny apremiaacutesedes a que viniese o enviase por la dicha su muger y dieacutesedes por libres los fiadores que tenyades para que dentro de un antildeo embiariacutea o verniacutea por

137 Reales Ceacutedulas de los antildeos 1502 y 1503 Academia de la Historia Coleccioacuten Muntildeoz tomo 75 fols 209 y 220 citado por Fernaacutendez Duro 15

154 JUAN FRANCISCO MAURA

ella o como la mi merced fuese lo cual visto por los de nuestro consejo juntamente con una peticioacuten presentada por dontildea Mariacutea Gudiel muger del dicho Alonso de Tapia por la cual nos suplica lo mismo que acor-dado que debiacutea mandar esta mi ceacutedula para vos por la qual vos mando que no compelaacuteis ni apremieacuteis al dicho Alonso de Tapia a que venga ni enviacutee a estos reinos por la dicha su muger si no fuere a que la pro-vea de lo que fuere necesario para su mantenimiento y deys por libres quales quier fianzas que sobre ello haya dado e no fagades ende al por alguna manera Firmado en la villa de Valladolid a VII diacuteas del mes de febrero de mil e quinientos e treinta y siete antildeos yo el licenciado Con-de de Samano y sentildealada del cardenal Beltraacuten y Carbajal [Aparte en letra pequentildea] Este diacutea se despachoacute una provisioacuten por la cuaacutel su Mag hizo merced a Alonso de Tapia de la veedoriacutea de la provincia de Paria por muerte de Garciacutea de Aguilar con las clausulas ordinarias y con el mismo salario que teniacutea Aguilar Firmado del emperador y de Beltraacuten y Bernal y Velaacutezquez El Rey (Registro de disposiciones Riacuteo Marantildeoacuten AGI Indiferente General Legajo 416 libro 2 Fols 94v y 95r)

El punto maacutes interesante a destacar de todas estas disposiciones oficiales en cuanto a la emigracioacuten femenina al Nuevo Mundo no es otro que la libertad que se da a la mujer de decidir si quiere o no casada o sin casar trasladarse al nuevo continente no como una imposicioacuten sino como un precepto laquoel espiacuteritu de las disposiciones en el sentido de asegurar la vida marital de los casados significa que la mujer que su marido invita a pa-sar a las Indias puede negarseraquo (Villafantildee 127) Habriacutea que ver las opciones laquorealesraquo ade-maacutes de las legales y econoacutemicas que le quedaban a la mujer si tomaba esta decisioacuten

El saber la libertad de eleccioacuten que estas mujeres teniacutean de antemano antes de aden-trarse en las interminables penalidades y aventuras que los viajes de la navegacioacuten tran-soceaacutenica suponiacutean hace que sus hechos y esfuerzos cobren auacuten maacutes relieve En nume-rosas ocasiones estas mujeres cruzaron el oceacuteano una y maacutes veces sin otro motivo que el de defender los derechos e intereses de los suyos Lo que resulta maacutes valioso de todo esto es que lo hicieran por propia iniciativa arriesgando sus vidas para que se hiciese justicia y para que no les faltase lo necesario a aquellos que estaban en la otra orilla Las autoridades vigentes conocedoras de los vaciacuteos legales existentes en las nuevas colo-nias se apresuraron a poner en vigor aquellas normas que redundaran en el beneficio de los menos favorecidos por las circunstancias La institucioacuten del matrimonio cuya trans-cendencia es fundamental en la vida juriacutedica y social de la mujer tuvo que ser legislada en Ameacuterica con una serie de nuevas disposiciones agregados modificaciones y aclara-ciones Asiacute pues la legislacioacuten de base espantildeola tuvo que sufrir en tierras americanas esta serie de cambios por motivos poliacuteticos y sociales (Villafantildee 126)

Para hacer un sumario de lo dispuesto hasta el siglo XVI en cuanto a la legislacioacuten de las mujeres que teniacutean familia o intereses en Indias merece la pena mencionar que existieron una serie de disposiciones que protegiacutean a las mujeres para que eacutestas no se viesen abandonadas por sus maridos En un epiacutegrafe de la Recopilacioacuten de 1680 (libro VII tiacutetulo 3) se deja ver claramente la preocupacioacuten de las autoridades en este asunto laquoDe los casados en Espantildea e Indias que estaacuten ausentes de sus mujeres y esposasraquo (Vi-llafantildee 126-27)

155ESPANtildeOLAS DE ULTRAMAR EN LA HISTORIA Y EN LA LITERATURA

La lista de disposiciones se hace interminable En los reinados de Fernando el Catoacute-lico Carlos V Felipe II Felipe III o incluso Carlos II la insistencia es constante La ra-zoacuten de esta insistencia seriacutea bastante obvia dado que con un oceacuteano por medio seriacutean muchos los que se aprovechasen de llevar una doble vida marital sin el estricto control y vigilancia de sus mujeres que se encontraban en la peniacutensula La ley XXVII libro IX tiacutetulo XXVI determina laquoDeclaramos por personas prohibidas para embarcarse y pasar a las Indias todos los casados y desposados en estos reinos lsquosino llevaren con ellos sus mujeresrsquo aunque sean virreyes oidores gobernadores o nos fuesen a servir en cual-quier cargo y oficios de Guerra Justicia y Hacienda porque es nuestra voluntad que todos los susodichos lleven a sus mujeresraquo (Villafantildee 127) laquoLos eclesiaacutesticos eran los en-cargados de dar cuenta a los tribunales competentes de aquellos que estando casados permaneciacutean en Indias sin sus mujeres Son reiteradas las disposiciones de Fernando el Catoacutelico en este sentidoraquo138 En 1514 el rey don Fernando ordena en una provisioacuten para la isla Espantildeola laquodoy licencia eacute facultad aacute cualquier persona naturales de estos Reynos para libremente se puedan casar con mujeres naturales de esa dicha ysla sin tener que incurrir por ello en pena algunaraquo (Villafantildee 129)

No se debe olvidar tampoco a aquellas mujeres que decidieron pasar a las laquonuevas tierrasraquo solteras Estas mujeres tambieacuten tuvieron un papel importante en el desarrollo de las nuevas colonias Los organismos espantildeoles del momento como los mandatarios indianos y todos los cronistas no dejaron pasar desapercibida la importancia social de estas mujeres en la poliacutetica de poblamiento laquo[E]s cierto que los pueblos de Indias nuevamente poblados no se tienen por fijos o estables ni permanentes hasta tanto que mujeres espantildeolas entren en ellos y los encomenderos y conquistadores se casen por muchas causas y respetos buenos y saludables que para ello hayraquo (Villafantildee 126-27)

Si la intencioacuten era la de una presencia permanente en las tierras americanas la mujer soltera que pasase a ellas siempre seriacutea un motivo maacutes para el colono o conquistador de continuar en el mismo suelo Se podriacutea empezar una familia si asiacute se quisiese sin tener que pensar en volver a la metroacutepoli ya fuese a disfrutar de los bienes adquiridos o a laquobuscarraquo una esposa El problema aparecioacute cuando se produjo un exceso de mujeres solteras lo que de alguna manera alteroacute la estructura social existente ya que no habiacutea muchas opciones para ellas aparte del matrimonio o el convento

En consideracioacuten a que la experiencia habiacutea demostrado que un exce-sivo nuacutemero de mujeres ejerciacutea perniciosa influencia sobre la moral y las costumbres se suplicaba al rey no otorgase a aquellas tantas auto-rizaciones para emigrar al Peruacute La ciudad de la Plata fundada en 1538 emite en 1577 un informe en el que se expone la urgente necesidad de que se funde un convento de monjas pues en el territorio de las Au-diencias de Los Charcas existiacutea un gran nuacutemero de muchachas que no pudieacutendose casar se hallaban en gran peligro de perderse (Konetzke laquoemigracioacutenraquo 149)

138 Solorzano Pereira Juan de Libro Primero de la Recopilacioacuten de las Ceacutedulas Reales Cartas y Provisiones y Or-denanzas Reales Noticia preliminar de Ricardo Levenne Universidad de Buenos Aires Facultad de Derecho Y Ciencias Sociales Pub del Instituto de Historia del Derecho Argentino Coleccioacuten de Textos y Documentos para la Historia del Derecho Argentino t V Buenos Aires Imp de la Universidad de Buenos Aires 1945 (Li-bro I Ley 10 laquoQue los Espantildeoles puedan casar con Indias y al contrario a su voluntadraquo t2 p 138 citado en Villafantildee 129

156 JUAN FRANCISCO MAURA

Entristece ver coacutemo se manejan las cifras de estas mujeres como si de ganado o de bienes suntuarios se tratase Por otra parte existieron irregularidades como la de pobla-doras espantildeolas que vivieron amancebadas con hombres que ya estaban casados en la peniacutensula Normalmente esto ocurriacutea cuando la estancia del conquistador se prolonga-ba maacutes de lo debido en lugares donde habiacutea pocas espantildeolas Muchas veces nacieron hijos de estas uniones que hicieron auacuten maacutes difiacutecil la situacioacuten para las mujeres que esperaban en Espantildea a un marido que ya no teniacutea ningunas intenciones de volver En los juicios de residencia los documentos acostumbran a citar estos casos ya que era parte de su obligacioacuten castigar las irregularidades extramatrimoniales y salvaguardar las buenas costumbres familiares que con tanto intereacutes se deseaba mantener laquoUn ejemplo nos lo da la isla de Cuba donde en 1532 viven con hombres casados Olalla Hernaacuten-dez Santillana Aranda lsquola Cordobesarsquo Catalina de Leoacuten Catalina Saacutenchez Francisca Hernaacutendez Mayor de Azebedo Juana de Valeros y lsquouna mujer que estaba en casa de Ayalarsquoraquo (Borges 416)

Estos casos no fueron aislados y mucho menos en Cuba centro neuraacutelgico de todo el movimiento de ida y vuelta entre la metroacutepoli y el Nuevo Mundo Estas ocho acusa-ciones por lo tanto no tienen porqueacute considerarse extraordinarias y menos en el lugar maacutes cosmopolita de las Indias en esos momentos al que llegaban flotas a cada momen-to Al parecer existieron casos parecidos en el Riacuteo de la Plata Peruacute y Nueva Espantildea (Ratcliffe 347) El margen legal para que estas mujeres viviesen como quisiesen estuvo limitado por una moral que veiacutea uacutenicamente en el matrimonio o el convento una salida laquovaacutelidaraquo para que fueran aceptadas socialmente Los hombres en iguales circunstan-cias fueron juzgados por una laquomoralraquo mucho maacutes permisiva

La mujer y el cuerpo eclesiaacutestico

Pues iquestquieacuten diablos os traiacutedo aquiacute dijo don Quijote siendo hombre de la iglesia iquestQuieacuten sentildeor replicoacute el caiacutedo laquomi desventuraraquo Pues otra mayor os amenaza dijo don Quijote sino me satisfaceacuteis a todo cuanto primero os pregunteacute (Cervantes Don Quijote )

Otro factor a tener en cuenta en un anaacutelisis sobre la presencia de la mujer en el Nuevo Mundo es el que tiene que ver con la institucioacuten maacutes importante de las que llegaron desde Europa la iglesia catoacutelica Sin aacutenimo de criticar a tan compleja institucioacuten res-ponsable de gran parte de los aconteceres en el Nuevo Mundo vale la pena analizar algunas singularidades Muchos de sus miembros fueron grandes ejemplos de valor e inteligencia a la hora de tratar los maacutes variados y escabrosos asuntos con los que se encontraron los cristianos en la otra orilla durante este periacuteodo Se debe resaltar tam-

157ESPANtildeOLAS DE ULTRAMAR EN LA HISTORIA Y EN LA LITERATURA

bieacuten su caraacutecter medieval en la manera de hacer apostolado y de entender y tratar a los potenciales cristianos Si se tienen en cuenta los privilegios y prerrogativas que algunas de las altas jerarquiacuteas eclesiaacutesticas tuvieron no seriacutea superfluo estimar que un respeta-ble porcentaje de la poblacioacuten de origen laquodudosoraquo muy bien podiacutea venir de la misma iglesia Fueron muchas las viacutectimas y muchas las familias divididas por un padre laquoinvi-sibleraquo Gran parte de los hijos o laquosobrinosraquo de estos sacerdotes pasaron a ocupar cargos similares incluyendo los privilegios que estos cargos llevaban consigo como si se trata-se de cualquier otro oficio gremial transmitido generacionalmente regla tan comuacuten en la Europa medieval Todaviacutea a finales del siglo XIII en Espantildea los derechos de los hijos y nietos de los sacerdotes estaban protegidos por la ley sin que hubiesen podido ser erradicados por las reformas gregorianas (Ratcliffe 347)139

Las letras espantildeolas ya se haciacutean eco de estos lances amorosos entre representantes de la Iglesia y ciertas damas del lugar desde los tiempos del poeta riojano Gonzalo de Berceo En su obra maacutes conocida Los milagros de Nuestra Sentildeora Berceo describe con un realismo ingenuo y sencillo relatos de humor y de humanismo sobre aquellos hombres de carne y hueso que eran perdonados por la intercesioacuten de la Virgen Mariacutea Juan Ruiz por su lado haraacute de su Libro de buen amor la obra maacutes representativa en este sentido Seriacutea prolijo recordar la actuacioacuten de la Iglesia durante diversos periacuteodos de la Edad Media no soacutelo en Espantildea sino en toda Europa En la Espantildea musulmana del siglo XII concretamente en Sevilla el comportamiento de los representantes de la iglesia cristia-na (mozaacuterabe) en territorio islaacutemico es duramente criticado por el sevillano Ibn Abdun Este precioso documento muestra el estricto control y falta de confianza que existiacutea sobre la mujer prohibieacutendolas que entrasen en las laquoabominablesraquo iglesias cristianas

porque los cleacuterigos [cristianos] son libertinos fornicadores y sodomi-tas Asimismo debe prohibirse a las mujeres francas que entren en la iglesia maacutes que en diacuteas de funcioacuten o fiesta porque alliacute comen beben y fornican con los cleacuterigos y no hay uno de ellos que no tenga dos o maacutes de estas mujeres con que acostarse Han tomado esta costumbre por haber declarado iliacutecito lo liacutecito y viceversa Convendriacutea pues mandar a los cleacuterigos que se casasen como ocurre en Oriente y que si quie-ren lo hagan (Leacutevi-Provenccedilal 150)

Pese a existir una convivencia paciacutefica durante gran parte de la Edad Media entre los tres credos monoteiacutestas de Espantildea (cristianos musulmanes y judiacuteos) esto no suponiacutea que no existiese desprecio y desconfianza entre estos grupos religiosos Dice Abdun resaltando el peligro que suponiacutea que una mujer entrase en casa de un cleacuterigo cristiano de vida ceacutelibe

No debe tolerarse que haya mujer sea vieja o no en casa de un cleacuterigo mientras eacuteste rehuacutese casarse Obliacutegueseles ademaacutes a circuncidarse co-mo les obligoacute al-Mutadid pues si a lo que dicen siguen el ejemplo de Jesuacutes (iexclDios les bendiga y salve) Jesuacutes se circuncidoacute y precisamente ellos que han abandonado esta praacutectica tienen una fiesta que celebran solemnemente el diacutea de su circuncisioacuten (Leacutevi-Provenccedilal 150-151)

139 Valdriacutea la pena ver si han cambiado mucho las cosas desde hace quinientos antildeos a esta parte o si in-cluso la iglesia moderna ha retrocedido en tolerancia en cuanto a las relaciones sexuales de los representantes de la Iglesia

158 JUAN FRANCISCO MAURA

El historiador argentino Germaacuten Arciniegas recoge un pasaje ilustrativo de lo men-cionado anteriormente pero trasladado al ambiente de la colonia diciendo que incluso en poblaciones pequentildeas como Santa Fe con poco maacutes de un convento y una ermita la fragilidad de la carne enredaba a frailes soldados y virreyes por igual laquoEl buen So-liacutes que murioacute en olor de santidad con la cabeza reclinada sobre un par de ladrillos y en saya de franciscano cruzaba en las noches el solar de su palacio para ir a besar a la Marichuelaraquo (118-19)

Arciniegas recoge tambieacuten un suceso aparecido en el diario de Lima en 1667 que no tuvo que ser extraordinario durante los primeros antildeos de la colonia laquoEl fraile carmelita mdashGrande hereje y siendo sacerdote deciacutea misa gran perro lujurioso deshonesto que relatando sus maldades dijo que en cierta ciudad habiacutea conocido carnalmente a maacutes de trescientas y sesenta mujeres y en un convento de monjas habiacutea cometido muchos sacrilegios Este lo trujeron preso de Buenos Aires por Chileraquo (119)

Las controversias de la iglesia moderna sobre las relaciones que los eclesiaacutesticos de-ben tener con el sexo femenino parece que no han encontrado todaviacutea respuesta Sigue existiendo miedo y recelo a que la mujer comparta no soacutelo poder en la jerarquiacutea de la iglesiacutea sino en la vida privada de los miembros de la institucioacuten En la Nueva Espantildea el primer obispo de Meacutexico Juan de Zumaacuterraga viendo en la mujer un ser de tentacioacuten irresistible prohibioacute terminantemente la presencia de eacutestas en su casa Ni siquiera para su limpieza y aseo El franciscano Juan de Torquemada se refiere a este comportamien-to como una de las virtudes del popular obispo

Fue este benditiacutesimo prelado muy amigo de la virtud y de virtuosos y aceacuterrimo reprehendedor de vicios y viciosos y tan enemigo de la ociosidad que no permitiriacutea que alguno de su casa estuviese ocioso fue amiciacutesimo de la limpieza por lo cual jamaacutes consintioacute que mujer alguna entrase en su casa aunque fuese necesaria al servicio de ella ni nunca consintioacute que por alguna ocasioacuten subiese mujer a lo alto y aposentos de ella antes lo teniacutea todo cerrado como un monasterio porque sabiacutea (como quien tambieacuten sabiacutea) que la ocasioacuten suele derribar los maacutes fuertes y robustos corazones (450 lib 20 cap 31)

No fueron uacutenicamente miembros de la iglesia catoacutelica los que valoraron la lucha con-tra la tentacioacuten siguiendo al pie de la letra el crudeliacutesimo refraacuten laquoentre santa y santo pared de cal y cantoraquo Se tienen algunas noticias de la vida social de los primeros tiem-pos de la colonia En estos documentos se puede observar coacutemo no distaban mucho las oacuterdenes que se dictaban en la metroacutepoli y las que se llevaban a cabo en la Nueva Espantildea La vida social tanto de damas como de algunos miembros de la iglesia de las colonias era maacutes laquorelajadaraquo de lo que las normas permitiacutean Gracias a la informacioacuten ofrecida por Manuel Romero de Terreros disponemos de los nombres de las primeras virreinas

Las esposas de los primeros cinco Virreyes Don Antonio de Mendoza Don Luis de Velasco Don Gastoacuten de Peralta Don Martiacuten Enriacutequez de Almanza y Don Lorenzo Suaacuterez de Mendoza Conde de la Coruntildea fueron respectivamente Dontildea Caterina de Vargas Dontildea Ana de Cas-tilla y Mendoza hija de Don Diego de Castilla Sentildeor de Gor y Caba-

159ESPANtildeOLAS DE ULTRAMAR EN LA HISTORIA Y EN LA LITERATURA

llerizo de Carlos V Dontildea Leonor de Vieo Dontildea Mariacutea Manrique hija del Marqueacutes de Aguilar y Dontildea Catalina de la Cerda hija del segundo Duque de Medinaceli (Romero 2)

Existen noticias concretas de la seacuteptima virreina de la Nueva Espantildea (1586) dontildea Blanca de Velasco marquesa de Villamanrique En ellas destaca lo anteriormente men-cionado sobre la falta de tolerancia existente en aquellos tiempos difiacutecilmente com-prensible si no fuera por fragmentos esporaacutedicos conservados sobre la vida colonial en la Nueva Espantildea En la siguiente Relacioacuten hecha por autores anoacutenimos sobre la visita que hizo Fray Alonso Ponce Comisario General de la Orden Seraacutefica a las provincias de la Nueva Espantildea se mencionan las eneacutergicas medidas que con los miembros de su orden en su opinioacuten de moral laquomuy relajadaraquo tomoacute este religioso Tambieacuten aparecen mencionadas sus relaciones con la Virreina

Captoacutese ademaacutes la enemistad del gobernante y de la Virreina Dontildea Blanca de Velasco hija del cuarto Conde de Nieva sentildeora seguacuten pare-ce de conducta ligera y caraacutecter maacutes que dominante laquoPor este mismo tiempo (septiembre de 1586) fueron el Virey y la Vireyna a holgarse y recrearse en la cibdad de Xochimilco Posoacute con toda su casa dentro de nuestro convento en un dormitorio deacutel y detuacutevose alliacute siete u ocho diacuteas en que los indios les hicieron grandes fiestas aunque les costaron caras porque en una dellas murieron dos o tres dellos con un tiro que se disparoacute y reventoacute y al principal indio de aquella cibdad hirieron muy malraquo (Romero 3-4)

A pesar del riacutegido control eclesiaacutestico y civil que habiacutea en la Nueva Espantildea existieron tambieacuten pareacutentesis en los que incluso miembros de la iglesia y mujeres mdashhumanos al fin y al cabomdash pudieron disfrutar de algunos momentos de regocijo y alegriacutea Con-tinuando con la cita anterior el mismo autor se queja del laquoexcesoraquo de libertad en los frailes que se suponiacutea que teniacutean que profesar una extremada pobreza y no digamos castidad En primer lugar se describen pormenorizadamente la abundancia en el tipo y cantidad de comida de toda clase dulces y vino que se consumieron con largueza y generosidad durante aquellas fiestas Pero lo que maacutes indigna al autor (o autores) fue que llegasen a entrar mujeres en el convento

y aunque todo esto es malo delante de Dios y delante de los hom-bres lo que maacutes mal parecioacute y de que todo el mundo tuvo que mur-murar fueacute la demasiada libertad rotura y disolucioacuten que hubo en en-trar y estar muy de propoacutesito mujeres no soacutelo la Vireyna y las suyas sino otras muchas dentro del dicho convento y andar por las celdas como si fuese cosa profana y como si no hubiera breve apostoacutelico que soacute graves penas y censuras prohibe estas entradas y como si a los frai-les no los comprendiera el dicho breve por admitirlas y no estuviera asiacute declarado y mandado por nuestros estatutos generales de Toledo (Romero 4-5)

La preocupacioacuten por las laquotentaciones de la carneraquo fuera del matrimonio siempre es-tuvo en la mente de los religiosos espantildeoles asiacute como de otras nacionalidades y reli-

160 JUAN FRANCISCO MAURA

giones que intentaban vanamente erradicar algo tan intriacutenseco al ser humano como a cualquier otra especie animal Esta preocupacioacuten se acentuoacute mucho maacutes en el Nuevo Mundo donde muchas sociedades tribales no veiacutean a la mujer como parte integrante de su propiedad privada La razoacuten es obviamente socioloacutegica y ha existido desde el principio de los tiempos en las civilizaciones maacutes primitivas laquoNo desearaacutes a la mujer del proacutejimoraquo El quebrantar este precepto equivaldriacutea a desestabilizar desde su base a la sociedad judeo-cristiana fundamentada en la familia Las penas aplicadas en estas transgresiones seraacuten lo suficientemente severas como para marginar socialmente mdashen el mejor de los casosmdash a aquellos que las pongan en praacutectica Siendo la mujer la encar-gada por la naturaleza de trasmitir la descendencia de la especie su libertad sexual se veraacute limitada por el peligro de quedar embarazada cada vez que ignore tal elemental precepto140

Primeras escritoras del Nuevo Mundo

Contra cuerdos y contra locos estaacute obligado cualquier caballero andante a volver por la honra de las mujeres cualesquiera que sean Cuanto maacutes por las reinas de tan alta guisa y pro como fue la reina Madaacutesima a quien yo tengo particular aficioacuten por sus buenas partes porque fuera de haber sido fermosa ademaacutes fue muy prudente y muy sufrida en sus calamidades que las tuvo muchas (Cervantes Don Quijote)

Fueron varias las escritoras que durante los siglos XVI y XVII tuvieron una relacioacuten di-recta o indirecta con el Nuevo Mundo Muchas de ellas eligieron la vida monaacutestica mdashen algunos casos como refugio huyendo de sus maridosmdash uacutenica salida en una estructura social en donde no eran muchas las opciones especialmente en una eacutepoca donde el fac-tor religioso pesaba casi tanto como el econoacutemico pero sobre todo para dedicarse a una vida espiritual difiacutecilmente alcanzable en otras circunstancias Mariloacute Vigil apunta que las monjas que lo eran por su propia voluntad ademaacutes de tener inquietudes religiosas tambieacuten las teniacutean intelectuales como es el caso de la escritora miacutestica espantildeola Santa Teresa de Jesuacutes (1515-1582) que ademaacutes de tener una de las vidas maacutes interesantes que se conozcan supo sacar tiempo para escribir las maacutes bellas manifestaciones de la poesiacutea liacuterica y sobre todo de la prosa castellana (Vigil 237-38) Cada una de estas mujeres de-dicadas a la vida literaria y espiritual de su tiempo se merece muchiacutesimo maacutes espacio del que se les pueda ofrecer en estas pocas liacuteneas No obstante con estas pasajeras men-

140 Aunque afortunadamente las cosas han cambiado para la mujer no se debe dejar de mencionar la can-tidad de abusos sexuales de la que es viacutectima en la sociedad moderna

161ESPANtildeOLAS DE ULTRAMAR EN LA HISTORIA Y EN LA LITERATURA

ciones se espera al menos incluirlas y poder despertar el suficiente intereacutes para que sus vidas y sus obras no sigan sumergidas en las simas del olvido Para que estas mujeres de la iglesia pudiesen satisfacer su curiosidad cognoscitiva era necesario romper todas aquellas barreras que supusiesen un estorbo o una restriccioacuten a la hora de investigar consultar o hablar con cualquier persona religiosa de cualquier orden o secular ya fue-se obispo o cleacuterigo Las posiciones intelectuales entre las diferentes oacuterdenes religiosas fueron muy dispares como bien es sabido No eran iguales los planteamientos teoloacute-gicos de los dominicos que los de los franciscanos o los de los carmelitas que los de los agustinos o jesuitas Era necesario por lo tanto tener acceso a estas fuentes de informa-cioacuten para poder constrastar las diferencias y hacer valoraciones propias (Vigil 237-38) El escritor espantildeol Caro Baroja destaca el caraacutecter enciclopeacutedico del catolicismo donde se han integrado corrientes y posturas muy dispares que a traveacutes del diaacutelogo daban cierto espacio al creyente con maacutes curiosidad intelectual para que este pudiese compa-rar y valorar las diferentes opciones que se le ofreciacutean (Vigil 237-38)

Varias de estas mujeres intelectuales fueron hijas de conquistadores que aunque na-cidas en suelo americano seguiacutean expresaacutendose en la lengua de sus padres con no me-nos fuerza que sus contemporaacuteneas peninsulares Es cierto que existieron numerosas escritoras en el Nuevo Mundo durante el siglo XVIII algunas dedicadas incluso al estudio de las matemaacuteticas como la mexicana Dontildea Francisca Gonzaga y Castillo Pero para limitar el presente trabajo a los siglos XVI y XVII uacutenicamente se incluiraacuten ejemplos de estos dos siglos

La peruana Josefa de Alarcoacuten publicoacute en 1648 unas liras dedicadas a las Exequias del Priacutencipe Baltasar Carlos

Cifro en capilla breveEl tribunal de la Magestad maacutes graveEn fe de lo que debeA Carlos que en dos mundos no cabe141

El caso de Sor Jeroacutenima de la Asuncioacuten es muy interesante una mujer que tuvo la oportunidad de viajar a Meacutexico y posteriormente a las Filipinas para cumplir con las mi-siones que le habiacutean sido encomendadas por su orden Nacida en Toledo en 1555 en el seno de una noble y acaudalada familia estuvo destinada a recorrer el mundo ofrecien-do sus servicios a todos los necesitados distinguieacutendose por su ardiente caridad laquovien-do que los galeotes eran tratados con dureza excesiva sobre todo cuando los llevaban de un pueblo a otro procuroacute aliviar las penas de aquellos desgraciados y lo consiguioacute en parteraquo (Serrano y Sanz 268 65) Hija del licenciado e ilustre jurista Pedro Garciacutea Yaacute-ntildeez y de dontildea Catalina de la Fuente ingresoacute contra su voluntad en el monasterio de las Clarisas de Santa Isabel de los Reyes (Toledo) el 5 de agosto de 1570 (Trevintildeo 46) hay que decir que eacutesta no seraacute la uacutenica voluntad contra la que tuvo que luchar

Sor Jeroacutenima se embarcoacute para Meacutexico y de alliacute partioacute hacia Manila junto con siete compantildeeras en el famoso laquoGaleoacuten de Manilaraquo que saliacutea anualmente del puerto mexi-cano de Acapulco Su viaje a las Filipinas duroacute un antildeo y tres meses desde su salida de Espantildea tiempo en el que demostroacute un gran valor y determinacioacuten por el soacutelo hecho de

141 Manuel Serrano y Sanz Apuntes para una biblioteca de escritoras espantildeolas desde el antildeo 1401 al 1833 vols 268 269 270 271 Biblioteca de Autores Espantildeoles (Madrid Atlas 1975) 268 19

162 JUAN FRANCISCO MAURA

embarcarse en tan precarias naves Fue la primera misionera de Oceaniacutea muriendo en Manila en 1621 Alliacute fundoacute el monasterio de Santa Clara que perviviriacutea hasta ser bom-bardeado en la Segunda Guerra Mundial (Trevintildeo 47) Escribioacute su Vida donde trata de la fundacioacuten del convento y de todas las tribulaciones mdashllegoacute a ser excomulgadamdash y satisfacciones que una vida dedicada a una causa justa proporciona Tambieacuten escribioacute una obra de caraacutecter filosoacutefico-teoloacutegico titulada Carta de marear en el mar del mundo nombre alegoacuterico que da cuenta de la enorme distancia recorrida a traveacutes del laquomar del espiacuterituraquo por sor Jeroacutenima He aquiacute algunos de sus versos de caraacutecter religioso

Vuestra soy para vos naciacuteiquestQueacute mandaacuteis hacer de miacute Inaccesible grandezaEterna Sabiduriacuteay bondad del alma miacuteaDios un ser poder y Altezamirad la suma pobrezade eacutesta que se ofrece aquiacuteiquestQueacute mandaacuteis hacer de miacute (Serrano y Sanz 268 66)

Ya en Meacutexico tenemos otro ejemplo de una mujer dedicada por completo a Dios y al estudio y composicioacuten de obras de caraacutecter teoloacutegico Dontildea Ana Mariacutea del Costa-do de Cristo nacida en la ciudad de Tlaxcala hacia el antildeo 1650 Tomoacute la orden de San Francisco para consagrarse a las labores de su orden y a la escritura Se dice que con los escritos de Dontildea Ana Mariacutea se podriacutean formar veinte tomos (Serrano y Sanz 268 282) Estas son algunas de sus obras Vida y muerte de Jesucristo Nuestro Sentildeor Vida del Seraacutefico Padre San Francisco de Asiacutes Vida de la iacutenclita Virgen Santa Clara Vida del sutiliacutesimo doctor Juan Duns Escoto

Pero no todas las monjas tuvieron vidas tan dedicadas al estudio y la oracioacuten Loacutegica-mente entre un nuacutemero tan grande de mujeres existioacute de todo y seriacutea un error pensar que todos los conventos femeninos estaban integrados por laquocaacutendidas palomasraquo Una monja en el siglo XVI y XVII teniacutea mucha maacutes fuerza que una mujer ordinaria ya que actuaban en grupo y la entrada a los recintos donde viviacutean estaba permitida solo a mu-jeres Esta situacioacuten las haciacutea mucho maacutes fuertes a todos los niveles que una mujer sola protegida uacutenicamente por su familia laquoLas monjas durante los siglos XVI y XVII lucharon por eludir la clausura y por zafarse del control que los frailes de las secciones masculi-nas de sus congregaciones ejerciacutean sobre ellasraquo (Vigil 230) Soacutelo un antildeo maacutes tarde que dontildea Ana Mariacutea del Costado de Cristo en 1651 y a 12 leguas de Meacutexico nacioacute la sin par Sor Juana Ineacutes de la Cruz hija de don Pedro Manuel de Asbaje natural de Vergara (Vizcaya) y de Dontildea Isabel Ramiacuterez de Santillana hija de espantildeoles (Serrano y Sanz 268 289) Por ser sin lugar a dudas la poeta maacutes importante de su tiempo y probable-mente la maacutes conocida del mundo hispano no profundizaremos en ella Su obra es un canto a la inteligencia y el exponente maacutes destacado de la literatura barroca americana tanto en prosa como en verso Destacareacute simplemente que Sor Juana Ineacutes pese a vivir en un sociedad donde no eran excesivas las libertades concedidas a las mujeres tuvo el caraacutecter y la determinacioacuten de dejarnos las maacutes bellas poesiacuteas amorosas que si bien estuvieron enmarcadas en un ambiente religioso como era de esperar por su condicioacuten

163ESPANtildeOLAS DE ULTRAMAR EN LA HISTORIA Y EN LA LITERATURA

pudieron transcender como unas de las maacutes bellas manifestaciones literarias que hoy en diacutea se conservan Fue su agudeza mental sensibilidad y cultura tal que no fueron suficientes los soacutelidos muros del convento para contener el genio de tan extraordinaria mujer Recordemos sus conocidiacutesimos versos en defensa de las mujeres

Hombres necios que acusaacuteisa la mujer sin razoacutensin ver que sois la ocasioacutende lo mismo que culpaacuteis142

Las metaacuteforas y la delicadeza que emplea en rebatir a su obispo en su laquoRespuesta a sor Filotea de la Cruzraquo no son solamente el epiacutetome del feminismo de su tiempo sino una de las maacutes brillantes manifestaciones del barroco hispano Poesiacutea teatro ensayo y un conocimiento extraordinario de las ciencias claacutesicas de su tiempo hacen de esta mujer un ejemplo extraordinario de las letras universales Ya son cientos los artiacuteculos y libros que se han escrito sobre Sor Juana y no dejan de aparecer tesis doctorales sobre los maacutes diversos temas conectados con la citada autora143 Como nos dice Stephanie Merrim en su documentada obra Early Modern Womenrsquos Writing and Sor Juana Ineacutes de la Cruz

She wrote and published on secular themes as atypical for a nun as human love Her remarkably extensive writings essayed and reenacted most of the (male) poetic dramatic theological and even philosophi-cal discourses of her times in the metropolis making her works a com-pendium of baroque culture in its diversity and syncretism Sor Juana self-creation as a learned women effectively toppled many of the walls in which she was materially enclosed and positioned her within the dynamic world of early modern European culture (xii)

No se debe dejar de mencionar a otras escritoras novohispanas de la eacutepoca que aun-que no fueron tan proliacuteficas y relevantes como Juana Ineacutes de la Cruz dejaron testimo-nio de algunos acontecimientos que tienen intereacutes socioloacutegico o testimonial Este es el caso de Dontildea Mariacutea Estrada Medinilla de igual nombre y apellido que la mujer que acompantildeoacute a las tropas de Corteacutes en su primera entrada a Meacutexico Natural de Meacutexico publicoacute toda su obra a mediados del siglo XVII concentraacutendose principalmente en la lle-gada del Marqueacutes de Villena virrey y capitaacuten general de la Nueva Espantildea a la ciudad de Meacutexico en el antildeo 1640 Escrita en octavas reales la obra trata de las fiestas de toros y cantildeas con que se obsequioacute al citado virrey Fue impresa en Meacutexico en 1641 (Serrano y Sanz 269 402)

Mucho maacutes importante para el presente libro es Dontildea Isabel de Guevara que escribioacute en 1556 la carta en que se expone la ayuda que ofrecieron las mujeres en el descubri-miento y conquista del Riacuteo de la Plata No cabe la menor duda de que esta carta es uno

142 Para una mejor comprensioacuten del caraacutecter de esta excepcional mujer veacutease entre los numeros trabajos publicados Fredo Arias de la Canal Intento de psicoanaacutelisis de Juana Ineacutes y otros ensayos sorjuanistas (Meacutexico Frente de Afirmacioacuten Hispanista 1972) 47

143 Veacuteanse entre otros trabajos Octavio Paz Sor Juana Ineacutes de la Cruz o las trampas de la fe Georgina Sabat de Rivers En busca de Sor Juana Margo Glantz Sor Juana la comparacioacuten y la hipeacuterbole Gerard C Flynn Sor Juana Ineacutes de la Cruz Stephanie Merrim Feminist perspectives on Sor Juana Ineacutes de la Cruz Pamela Kirk Sor Juana Ineacutes de la Cruz religion art and feminism

164 JUAN FRANCISCO MAURA

de los documentos maacutes importantes con que contamos en relacioacuten a la aportacioacuten fe-menina en el proceso de la conquista de Ameacuterica Su importancia viene dada por varios factores Primero es uno de los primeros testimonios mdashsi no el primeromdash en donde se expone abiertamente la indispensable colaboracioacuten de las mujeres en el descubrimien-to y conquista de tierras en el Nuevo Mundo laquoQue si no fuera por ellas todos fueran acabadosraquo En segundo lugar la informacioacuten vertida en estas liacuteneas presenta en parte la manera de pensar de una mujer espantildeola en tales circunstancias Extraordinario tes-timonio de primera mano que nos da una idea de lo que significoacute en muchos casos el valor y entrega constantes de muchas de estas mujeres que auacuten a riesgo de perder sus vidas no dudaron en luchar al lado de los hombres por una causa que consideraban laquocomuacutenraquo

La relevancia histoacuterica de dicha carta hace que merezca ser transcrita en su totali-dad

Carta de dontildea Isabel de Guevara a la princesa gobernadora dontildea Juana exponiendo los trabajos hechos en el descubrimiento y conquista del Riacuteo de la Plata por las mujeres para ayudar a los hombres y pidiendo repartimiento

para su marido Asuncioacuten 2 de julio de 1556

Muy alta y muy poderosa sentildeora

A esta provincia del Riacuteo de la Plata con el primer gobernador de ella don Pedro de Mendoza hemos venido ciertas mujeres entre las cuales ha querido mi ventura que fuese yo la una y como la armada llegase al puerto de Buenos Aires con mil quinientos hombres y les faltase el bastimento fue tamantildea el hambre que a cabo de tres meses murie-ran los mil esta hambre fue tamantildea que ni la de Jerusalem se le puede igualar ni con otra ninguna se puede comparar Vinieron los hombres en tanta flaqueza que todos los trabajos cargaban de las pobres mu-jeres asiacute en lavarles las ropas como en curarles hacerles de comer lo poco que teniacutean limpiarlos hacer centinela rondar los fuegos armar las ballestas cuando algunas veces los indios les veniacutean a dar guerra hasta cometer a poner fuego en los versos y a levantar los soldados los que estaban para ello dar arma por el campo a voces sargentean-do y poniendo en orden los soldados porque en este tiempo como las mujeres nos sustentamos con poca comida no habiacuteamos caiacutedo en tanta flaqueza como los hombres Bien creeraacute V A que fue tanta la so-licitud que tuvieron que si no fuera por ellas todos fueran acabados y si no fuera por la honra de los hombres muchas maacutes cosas escribiera con verdad y los diera a ellos por testigos Esta relacioacuten bien creo que la escribiraacuten a V A maacutes largamente y por eso cesareacute Pasada esta tan peligrosa turbunada determinaron subir el riacuteo arriba asiacute flacos como estaban y en entrada de invierno en dos bergantines los pocos que quedaron vivos y las fatigadas mujeres los curaban y los miraban y les guisaban la comida trayendo la lentildea a cuestas fuera del naviacuteo y animaacutendolos con palabras varoniles que no se dejasen morir que presto dariacutean en tierra de comida metieacutendolos a cuestas en los

165ESPANtildeOLAS DE ULTRAMAR EN LA HISTORIA Y EN LA LITERATURA

bergantines con tanto amor como si fueran sus propios hijos Y como llegamos a una generacioacuten de indios que se llaman tinbues sentildeores de mucho pescado de nuevo los serviacuteamos en buscarles diversos modos de guisados porque no les diese en rostro el pescado a causa de que lo comiacutean sin pan y estaban muy flacos Despueacutes determinaron subir el Paranaacute arriba en demanda de bastimento en el cual viaje pasaron tanto trabajo las desdichadas mujeres milagrosamente quiso Dios que viviesen por ver que en ellas estaba la vida de ellos porque todos los servicios del naviacuteo los tomaban ellas tan a pechos que se teniacutea por afrentada la que menos haciacutea que otra sirviendo de marear la vela y gobernar el naviacuteo y sondar de proa y tomar el remo al soldado que no podiacutea bogar y escotar144 el naviacuteo y poniendo por delante a los soldados que no se desanimasen que para los hombres eran los trabajos verdad es que a estas cosas ellas no eran apremiadas ni las haciacutean de obliga-cioacuten ni las obligaba si solamente la caridad Asiacute llegaron a esta ciudad de la Asuncioacuten que aunque ahora estaacute muy feacutertil de bastimentos en-tonces estaba de ellos muy necesitada que fue necesario que las muje-res volviesen de nuevo a sus trabajos haciendo rosas con sus propias manos rosando y carpiendo y sembrando y recogiendo el bastimento sin ayuda de nadie hasta tanto que los soldados guarecieron de sus fla-quezas y comenzaron a sentildeorear la tierra y adquirir indios e indias de su servicio hasta ponerse en el estado en que ahora estaacute la tierra He querido escribir y traer a la memoria de V A para hacerle saber la ingratitud que conmigo se ha usado en esta tierra porque al presente se repartioacute por la mayor parte de los que hay en ella asiacute de los anti-guos como de los modernos sin que de miacute y de mis trabajos se tuviese ninguna memoria y me dejaron de fuera sin me dar indio ni ninguacuten geacutenero de servicio Mucho me quisiera hallar libre para me ir a presen-tar delante de VA con los servicios que a SM he hecho y los agravios que ahora se me hacen mas no estaacute en mi mano porque estoy casada con un caballero de Sevilla que se llama Pedro de Esquivel que por servir a SM ha sido causa que mis trabajos quedasen tan olvidados y se me renovasen de nuevo porque tres veces le saqueacute el cuchillo de la garganta como allaacute VA sabraacute A que suplico mande me sea dado mi repartimiento perpetuo y en gratificacioacuten de mis servicios [en el origi-nal del AHN Diversos doc 141 dice ademaacutes mande que sea proveydo mi marido de alguacuten cargo conforme a la calidad de su persona pues el de su parte por sus servicios lo merece] lo merece Nuestro sentildeor acre-ciente su Real vida y estado por muy largos antildeos De esta ciudad de la Asuncioacuten y de julio 2 1556 antildeosServidora de V A que sus Reales manos besa

Dontildea Isabel Guevara

144 Sacar agua de un riacuteo acequia o presa

166 JUAN FRANCISCO MAURA

Sobremdash A la muy alta y muy poderosa sentildeora Princesa dontildea Joana Gobernadora de los reinos de Espantildea etc ndash En su Consejo de Indias (Isabel de Guevara 619-21)

Iroacutenicamente la carta teniacutea que llegar a manos de la desdichada heredera del trono de Castilla e hija de los Reyes Catoacutelicos Juana laquola Locaraquo que habiacutea muerto el antildeo an-terior Son profeacuteticas las palabras de esta mujer no soacutelo porque sus hechos personales quedasen en el olvido sino porque incluso se ha borrado la historia de las mujeres en el Nuevo Mundo negando su presencia Por lo menos Isabel Guevara tuvo acceso a una pluma iquestCuaacutentas seriacutean las que ni siquiera sabriacutean escribir

Otra contemporaacutenea fue dontildea Leonor de Iciz que vivioacute durante la segunda mitad del siglo XVI Interesa sobre todo por los sonetos que escribioacute en elogio de Ercilla soldado que participoacute en la conquista de Chile y que se inmortalizoacute con su obra La Araucana (Serrano y Sanz 269 534) Lo mismo hizo Dontildea Bernarda Lintildeaacuten en 1610 autora de otro soneto en memoria del capitaacuten Gaspar Peacuterez de Villagraacute que participoacute en la conquista de Nuevo Meacutexico (Serrano y Sanz 270 14) Los escritos de estas mujeres tratan de de dos de las eacutepicas maacutes dramaacuteticas de la conquista

En el Peruacute y en pleno siglo XVII aparece otra fundadora de conventos Sor Bernardina de Jesuacutes que ademaacutes fue comparada con Santa Teresa por la semejanza de sus laquocartasraquo con las de la santa de Avila Fue fundadora del convento de Tacunga en Quito maacutes tarde destruiacutedo por un terremoto Dice Serrano y Sanz con respecto a su biografiacutea un tanto legendaria que fue carmelita descalza de Lima y hermana de Dontildea Mariacutea Benavides y Esquivel abuela de D Pedro de Peralta Barnuevo (Serrano y Sanz 269 553) Dicen que esta santa se alimentoacute durante treinta antildeos con laquochochos y caacutescaras de naranja hecho tan raro como increiacuteble Cuando fallecioacute reparaban las monjas en ponerle una vara de azucenas porque habiacutea sido casada y aquellas flores aparecieron milagrosamente sobre el cadaacuteverraquo (Serrano y Sanz 269 553)

Otra limentildea del primer cuarto del siglo XVII con reputacioacuten de santa fue Dontildea Luisa Melgarejo En este caso no se trata de una religiosa de oficio sino de la mujer del doctor Juan de Soto La uacutenica diferencia es que dontildea Luisa al parecer teniacutea laquovisiones y reve-lacionesraquo lo que debioacute poner nervioso a maacutes de un miembro del tribunal del laquoSanto Oficioraquo que consideraron sus escritos laquoculpadosraquo De su papel de laquosantaraquo pasa por lo tanto al de laquoposesaraquo o laquoendemoniadaraquo El inquisidor de Lima Gaitaacuten escribioacute un infor-me donde a traveacutes de la opinioacuten puacuteblica y de otras averiguaciones se deciacutea que dontildea Luisa Melgarejo laquomujer santaraquo sabiacutea cuando las almas de los difuntos saliacutean del Purga-torio El diacutea 14 de noviembre de 1623 se decidioacute tomar posesioacuten de todos los cuadernos en los que habiacutea escrito las experiencias de todos sus laquoarrobos suspensiones extasis y revelacionesraquo Estos cuadernos una vez recogidos presentaron toda una serie de al-teraciones borrones adiciones enmiendas incluso diferente letra por lo que despueacutes de haber sido examinados resultaron culpables145 Excelente imaginacioacuten debioacute tener dontildea Luisa Melgarejo la suficiente al parecer para convencer a algunos miembros de la iglesia de que en sus escritos laquohabiacutea algoraquo que mereciacutea la pena Estas cosas ocurriacutean en Lima uno de los centros culturales maacutes importantes de la vida social y poliacutetica en la Ameacuterica espantildeola Lima a comienzos del siglo XVII seguacuten el empadronamiento llevado

145 Serrano y Sanz 270 47 Veacutease J T Medina Historia del tribunal del Santo Oficio de la Inquisicioacuten de Lima (1569-1820) (Santiago Imprenta Gutemberg 1887) Tomo II 34-41

167ESPANtildeOLAS DE ULTRAMAR EN LA HISTORIA Y EN LA LITERATURA

a cabo en 1614 por el marqueacutes de Montesclaros era una ciudad de 25000 habitantes de los que 11000 eran espantildeoles El nuacutemero de religiosos y religiosas llegaba a 1720 (Pittaluga 77)

Se sabe que en la Isla de Santo Domingo durante el siglo XVI nacioacute o al menos resi-dioacute una poeta de ceacutelebre apellido en los aconteceres del Nuevo Mundo Dontildea Elvira de Mendoza de la que se conserva un manuscrito en la Real Academia de la Historia laquoCantares miacuteos que estaacuteis rebeladosraquo Eugenio de Salazar hace un elogio de ella como poeta en un Soneto a la ilustre Poeta y Sentildeora Dontildea Elvira de Mendoza moradora en la ciudad de Santo Domingo (Serrano y Sanz 270 53)

Nacida en Burgos sobre el antildeo 1590 dontildea Luisa de Padilla merece un lugar aparte dentro del grupo de mujeres escritoras de su eacutepoca Por su estilo faacutecil y castizo su no-vedad de pensamientos y su rica erudicioacuten recibioacute el siguiente comentario de Manuel Serrano y Sanz laquoPocas figuras hay en nuestra historia literaria femenil que puedan compararse a esta eminente prosista acaso la maacutes notable de cuantas florecieron en Es-pantildea durante el siglo XVIIraquo (Serrano y Sanz 270 95-96) Este comentario y comparacioacuten deberiacutea ampliarse para que tambieacuten incluyese a laquola historia literaria varonilraquo

Dontildea Luisa fue defensora de la labor que la Inquisicioacuten estaba realizando en la laquolim-piezaraquo de mujeres laquosoldados del demonioraquo que existieron en algunas provincias espa-ntildeolas en aquel tiempo Muchas de las mujeres que combinaban la magia con los po-deres curativos fueron condenadas no solamente por hombres de la Inquisicioacuten sino tambieacuten por mujeres de todas las clases sociales como es el caso de Luisa de Padilla condesa de Aranda En su obra Elogios de la verdad e invectiva contra la mentira preveniacutea contra aquellos que practicaban artes en contra de la religioacuten cristiana La magiacutea negra seguacuten Padilla era la causante de que muriesen casi tantas personas como otras causas naturales habieacutendose descubierto hasta seis mil brujas en Vizcaya y Guipuzcua con-fesando una mujer de un pueblo pequentildeo haber matado con su laquomagiaraquo a ochocientas personas (Perry 31) Eran estos laquomales de ojoraquo y maldiciones seguacuten la autora las causas de que se secasen los pechos de las madres lactantes que se separasen las parejas casa-das y que abortasen las embarazadas (Perry 31)

Si se tiene en cuenta que dontildea Luisa estuvo emparentada con la maacutes rancia aristocra-cia de su tiempo o lo que es lo mismo con algunos de aquellos que en cierta manera dirigiacutean los destinos de Espantildea en aquella eacutepoca (Duques de Lerma Duque de Uceda Marqueacutes de Cueacutellar Conde de Santa Gadea Marqueacutes de Belmonte por citar algunos) se comprenderaacute mejor su identificacioacuten con una institucioacuten que en teoriacutea velaba por la salvaguarda de los valores laquoeternosraquo de una Espantildea destinada a ser la campeona del ca-tolicismo durante los siglos XVI y XVII El padre de dontildea Luisa fue don Martiacuten de Padilla y Manrique extraordinario militar que proboacute su valor contra enemigos moriscos ingle-ses holandeses piratas berberiscos y el renegado genoveacutes Muley Faxad Fue veterano de la batalla de Lepanto donde apresoacute a cuatro galeras y acompantildeoacute con su escuadra a la reina Dontildea Margarita de Austria cuando vino de Geacutenova en 1598 laquoHabiacutea obtenido a 24 de julio de 1587 el tiacutetulo de Conde de Santa Gadea y en 1596 el de Capitaacuten General de la Armada del mar Oceacuteanoraquo (Serrano y Sanz 27095-96)

Por otra parte tambieacuten se sabe que dontildea Luisa participoacute directamente y desde tem-prana edad en la praacutectica de algunas actividades intelectuales como la historia y la arqueologiacutea a la vez que dedicaba su tiempo a virtudes cristianas como la caridad y el socorro de los necesitados (Serrano y Sanz 270 97) Resulta mucho maacutes faacutecil compren-

168 JUAN FRANCISCO MAURA

der la postura ideoloacutegica de esta gran mujer si tienen en cuenta ademaacutes de los factores antes mencionados otros tantos de caraacutecter biograacutefico concernientes a su educacioacuten y matrimonio

Otra escritora fue la mexicana dontildea Mariacutea Casilda Pozo natural de Temestla (Meacutexi-co) Nacida en el mes de abril de 1682 dejoacute escrita su biografiacutea en 16 cuadernos el ma-nuscrito original se encuentra en la biblioteca del colegio de San Gregorio de Meacutexico Fue su confesor el jesuiacuteta Domingo Quiroga que fue quieacuten la incitoacute a escribir su obra (Serrano y Sanz 270 137) Sor Juana de San Antonio aparece a principios del siglo XVII formando parte de un grupo de religiosas espantildeolas que fueron a Manila por la ruta de Meacutexico Ademaacutes de distinguirse por sus cualidades personales su obra interesa por ofrecer informacioacuten testimonial y costumbrista acerca de la forma de vestir de chinos y japoneses (Serrano y Sanz 270 225)

Otra monja esta vez ecuatoriana fue Gertrudis de San Ildefonso Nacida en 1652 profesoacute su vocacioacuten en el convento de Santa Cruz de Quito dejando escrita su vida por mandato de su confesor el padre Martiacuten de la Cruz el cual hizo una biografiacutea laquoen tres gruesos voluacutemenesraquo Gertrudis de San Ildefonso murioacute en 1709 (Serrano y Sanz 270 300) en olor de santidad

Sor Mariacutea Ana Agueda de San Ignacio nacioacute el 3 de marzo de 1695 en la dioacutecesis de la puebla de los Angeles en un rancho del lugar de Santiago Tecaliacute (Serrano y Sanz 270300) Esta monja mexicana escribioacute varias obras durante su vida conventual a lo largo de la cual desempentildeoacute el cargo de priora por muchos antildeos Entre sus obras todas de caraacutecter piacuteo y de laquoamor divinoraquo escribioacute un curioso y laquocopiosoraquo tratado de la Leche virginal de la Soberana Madre de Dios El padre Fr Juan de Villa Saacutenchez hace el siguiente comentario al respecto laquoen que hablando primero en sentido natural de los beneficios que debemos a Nuestra Sentildeora pasa a tratar en sentido miacutestico y alegoacuterico enten-diendo en la leche la doctrinaraquo (Serrano y Sanz 270301) Mexicana fue tambieacuten Sor Petronila de San Joseacute que ejercioacute como abadesa del Real monasterio de Jesuacutes Mariacutea de la ciudad de Meacutexico Escribioacute Vidas de varias religiosas ejemplares obra que tiene su im-portancia ya que al parecer laquoDe esta obra se sirvioacute D Carlos de Siguumlenza y Goacutengora para escribir su Parayso Occidental (Meacutexico 1684) seguacuten eacutel mismo declara en el proacutelogo diciendo lsquoa quien si hay algo bueno en esta historia se le debe todorsquoraquo (Serrano y Sanz 270 354) Menos conocida fue su compatriota Sor Luisa de Santa Catalina natural de Xacona laquopueblo situado en las inmediaciones de Zamora (Meacutexico)raquo siendo bautizada en 1682 Escribioacute Cartas espirituales a su confesor el P Juan Loacutepez de Aguado (Serrano y Sanz 270 361-62)146

Todos estos escritos la mayoriacutea de ellos ignorados por el gran puacuteblico tienen la im-portancia de darnos una perspectiva diferente En otras palabras ensentildearnos la maacutes refinada sensibilidad de muchas mujeres que permanecieron y en su mayoriacutea siguen permaneciendo a laquooscurasraquo de una eacutepoca tan rica de la literatura espantildeola como fue el Siglo de Oro Este siglo fue tambieacuten en su dimensioacuten literaria y artiacutestica patrimonio de la mujer

146 Para profundizar en muchas de estas escritoras hispano-americanas la consulta de la Biblioteca Hispano-Americana de Beristain de Souza resulta de capital importancia

169ESPANtildeOLAS DE ULTRAMAR EN LA HISTORIA Y EN LA LITERATURA

Sor Nada ardores divinos de una monja adolescente escritos ineacutedi-tos de una recieacuten profesa del siglo XVI147

iexclQueacute encantadores son tus amores hermana miacutea espo-sa iexclQueacute deliciosos son tus amores maacutes que el vino Y el aroma de tus perfumes es mejor que el de los baacutelsamos Miel virgen destilan tus labios esposa miel y leche hay en tu lengua y el perfume de tus vestidos es como aroma de incienso (Cantar de los Cantares 4 10-11)

Sor Nada llamada asiacute por humildad seguacuten dice el Indice de manuscritos de la Biblio-teca Nacional de Madrid es uno de los ejemplos maacutes desconocidos e interesantes que tenemos de la poesiacutea y prosa amoroso-religiosa del siglo XVII Hasta la fecha nunca se habiacutea publicado su obra e incluso hasta el antildeo 1995 para mi sorpresa no habiacutea copias microfilmadas de sus manuscritos en la Biblioteca Nacional Serrano y Sanz en su libro Apuntes para una Biblioteca de Escritoras Espantildeolas hace una escueta y pasajera mencioacuten de esta mujer y de su obra (68-69) siendo eso todo lo que hasta ahora se sabiacutea de ella Sus escritos consisten en los siguientes manuscritos

1 laquoEn queacute consiste un verdadero amor de Diosraquo 9 hojas uacutetiles en 4ordm letra del siglo XVII Biblioteca Nacional de Espantildea Manuscrito 1295926

2 laquoPintura del Propio Amorraquo laquoPintura del propio Amorraquo 10 hojas uacutetiles en 4ordm letra del siglo XVII Biblioteca Nacional de Espantildea Manuscrito 1295927

3 laquoEsplicacioacuten sobre en queacute consiste la paz del Almaraquo laquoQuartillas aacute un Alma que padece soledad interiorraquo 7 hojas uacutetiles en 4ordm letra del siglo XVII Biblioteca Nacio-nal de Espantildea Manuscrito 1295828

En cuanto a su persona soacutelo se nos dice que laquose encubrioacute con este seudoacutenimo laquoSor Nadaraquo Esta monja desconocida de origen hispanoamericano posee toda la frescura e ingenuidad de una joven apasionada metida por vocacioacuten u obligacioacuten a ejercer la profesioacuten maacutes comuacuten para mujeres de cierta clase social de su tiempo En sus liacuteneas podemos encontrar un misticismo simple incluso en algunos momentos infantil pero a su vez lleno de una fuerza y sensualidad interior poco comuacuten en escritos de este geacute-nero que desborda los liacutemites del laquoamor divinoraquo a traveacutes de los diaacutelogos entre el Alma y el Esposo Sor Nada consigue proyectar su amor a Dios maacutes allaacute de una experiencia romaacutentica Su experiencia es sincera y genuinamente miacutestica trascendiendo la imita-cioacuten o la propia creacioacuten poeacutetica ficcionalizada (Hatzfeld 30) Algunos pasajes son de un

147 Veacutease mi artiacuteculo Sor Nada ardores divinos de una monja adolescente escritos ineacuteditos de una monja profesa del siglo XVIIraquo Espeacuteculo Revista de estudios literarios 26 (2004) 1-10 Universidad Complutense de Madrid http wwwucmesinfoespeculonumero26sornadahtml

170 JUAN FRANCISCO MAURA

alto contenido eroacutetico con sustantivos y metaacuteforas que recuerdan la maacutes iacutentima unioacuten amorosa en unos casos y el tierno amor maternal en otros

[T]e miro Jesus mio desnudo a las inclemencias del tiempo y ardien-do en puro fuego de Amor por la salud de las Almas y me ensentildeas a que te ame con todo mi corason y puresa de espiritu No atendiendo ni buscando umanos intereses ni a solisitar consuelos ni regalos espi-rituales que suelen empantildear la puresa del noble corason No mi Jesus amable pues antes me ensentildeaste tu puro Amor que desnudo sean [sic] de encaminar mis passos desde el pesebre asta la cuna en donde te miro tan desnudo como el pesebre y todo Sentildeor por mi Amor (Mss 12959 26 hoja 1 v)

El manuscrito (12959 27) de la mencionada serie de tres contiene algunas correccio-nes quizaacute hechas por el confesor o quizaacute por ella misma cuando se dirige con excesiva familiaridad y arrebatado fervor a su Amado148 He escogido el manuscrito (12959 Caja 28) en primer lugar por ser el ejemplo maacutes representativo de su poesiacutea y prosa En este manuscrito encontramos de forma maacutes directa que alegoacuterica toda la frescura de un diaacutelogo entre Jesuacutes y el alma que raya como diriacutea Cervantes laquoa la llana y sin rodeosraquo (667 lib 2 cap 38) con el doloroso y a veces desesperado deseo de la entrega y la unioacuten final con el Amado La ortografiacutea no ha sido corregida respetaacutendose el texto ori-ginal149 Veamos el siguiente fragmento

Mira que te amo con Amor de padre y con Amor de esposo el mas fino y puro enamorado que no tan solo me presio de darte mi mano sino tambien todo mi cuerpo y sangre para que con mi pan de vida te sustentes y te regales a tus anchuras y que con mi propio espiritu vivas en paz como tu lo deseas y que mis amores sean unico alivio en tus trabajos en esta mortal vida pues si esto es asi y sabes que muero por darte vida dime esposa mia de que te fatigas Dame querida tus bras-sos y dime si me amas como yo te amo (Hoja 4)

148 La antologiacutea de Promis ha procurado insertar entre los textos antoloacutegicos algunos que se refieren a la es-critura de mujeres fundamentalmente de aquellos generados en el interior de los espacios conventuales Estos textos se fundan como laquohistorias de vidasraquo y responden casi siempre a los requerimientos de los confesores de las monjas coloniales En este sentido resulta valiosiacutesima la incorporacioacuten de la llamada Relacioacuten autobiograacute-fica de Sor Ursula Suaacuterez como una muestra significativa de la escritura monjil entendida en esta eacutepoca (como tambieacuten en la tradicioacuten europea medieval) inserta en las denominadas laquolabores de manoraquo de las religiosas ya que el texto escrito por mandato se convertiacutea en una suerte de entramado o tejido linguumliacutestico es decir en un nuevo bordado que la mayor parte de las veces el confesor convertido en censor iba haciendo tachando y enmendando En la antologiacutea Promis agrega un texto de Sor Tadea Garciacutea de la Huerta titulado Relacioacuten de la inundacioacuten que hizo el riacuteo Mapocho de la ciudad de Santiago de Chile en el monasterio de Carmelitas titular de San Rafael el diacutea 16 de junio de 1783 se trata de un poema tipo romance escrito en versos octosilaacutebicos y que da cuenta de lo sucedido ese diacutea en el convento (Resentildea de la literatura del reino de Chile de Joseacute Promis Eddie Morales Pintildea httpwwwupaclpublicaciones2002literatura_promishtm)

149 Son frecuentes las faltas ortograacuteficas Una de ellas es el uso constante del seseo La ausencia de acentua-cioacuten y puntuacioacuten exceptuando alguacuten punto o coma arbitrario no seguido casi nunca de mayuacutescula inicial lo mismo que el uso igualmente aribitrario de la h o de b v r q g j m n x etc No olvidemos de la misma forma la laxitud linguumliacutestica existente en el siglo XVII (no sabemos a queacute parte de eacuteste pertenece el manuscrito) asiacute como la joven edad de la monja

171ESPANtildeOLAS DE ULTRAMAR EN LA HISTORIA Y EN LA LITERATURA

Los versos del presente manuscrito poseen la misma fuerza que tiene su prosa Con una estructura estroacutefica indefinida estaacuten aparentemente corregidos por alguien que tu-vo la oportunidad de conocer personalmente a la autora Muy probablemente se trate del padre al que hace referencia al principio del primer manuscrito laquoMandame el Pd que le declare en que consiste un verdadero amor a Diosraquo a continuacioacuten continuacutea con su caracteriacutestica humildad laquo[O]bedesere y dire lo q Dios me inspire segun mi rudesa y simplisidadraquo (Mss 12959 26) En cuanto a la fuerza pasional de esta joven observamos con cierta tristeza coacutemo aparece sublimada en sus escritos con toda la enegiacutea de una joven mujer llena de intensidad y vida pero encerrada en los liacutemites de un convento Veamos un ejemplo en donde responde el Alma en los siguientes versos

O mi enamorado Jesus O mi dulse y tierno amanteO alegria de los sielos O dulse Jesus amable

(Toda Sentildeor me derrito toda Sentildeor me desagoy quiero vivir por ti ea sentildeor abrasadme) [Tachado en el original]

Toda Sentildeor me derrito toda Sentildeor me desagoy quiero morir por vos ea Sentildeor que ya acabo

Ya tus amores me llaman ya tus perfumes me traencon suspiros y agonias Sentildeor hasta que te alcanse

O mi Jesus amoroso no puedo mas dilatarmeya la pasiensia me falta dulse Jesus abrasadme

(No puedo vivir sin vos no puedo mas dilatarmeya la pasiensia me falta dulse) [Tachado en el original]

No puedo vivir sin vos mi dulse Jesus amablepues me teneis echisada siendo mi esposo y mi Padre

Ay que me abraso Ay que me quemo del Amor deJesus nasareno como no tocan y tantildeen a fuego150

Estos versos llenos de arrebato sublimado conectan con toda la tradicioacuten miacutestica es-pantildeola que se remonta a Ramoacuten Llul y que culmina en el maacutes universal de nuestros

150 En toda la fuerza y simbologiacutea del amor maacutes iacutentimo del maacutes alto y sublime placer de la unioacuten de los amantes tal como lo encontramos en el Cantar de los Cantares y en San Juan de la Cruz Leemos en la Biblia

Ya me he quitado la tuacutenica iquestCoacutemo volver a vestirme Ya me he lavado los pies iquestCoacutemo volver a ensuciarlosMi amado metioacute su mano por el agujero (de la llave) y mis entrantildeas se estremecieron por eacutel Me levanteacute para abrir a mi amado Mis manos destilaron mirra y mis dedos mirra exquisita en el pestillo de la cerradura (5 3-5)

Nos ocurre lo mismo con San Juan de la Cruz en su insuperable poema laquoLlama de amor vivaraquo

iexclOh cauterio suaveiexclOh regalada llagaiexclOh mano blanda iexclOh toque delicadoque a vida eterna sabey toda deuda pagaMatando muerte en vida la has trocado

172 JUAN FRANCISCO MAURA

miacutesticos San Juan de la Cruz Esta tradicioacuten se extiende hasta finales del siglo XVII esto es hasta los finales del Barroco siendo un poco maacutes tardiacuteo en la Ameacuterica espantildeola Sin tener como propoacutesito discutir en el presente trabajo a queacute corriente miacutestica pertenece la obra de Sor Nada es necesario resaltar no obstante el hecho de que estaacute escrito por una mujer y ademaacutes de tierna edad El manuscrito 12959 Caja 26 termina con estas pa-labras laquo[T]odas estas boverias escrivi por entretenimiento siendo resien profesa en la religion Sor Nadaraquo Mas no por la juventud de su autora los escritos dejan de tener lo-gradas metaacuteforas imaacutegenes y siacutembolos sacados de la naturaleza La alegoriacutea de la unioacuten matrimonial poseeacute el fuego liacuterico de la maacutes apasionada de las relaciones amorosas vivi-ficada por perfumes flores insectos animales escarchas nieves o abrojos Por lo tanto aunque la narracioacuten destile cierta ingenuidad no carece por ello de un vocabulario rico con el sabor popular de la poesiacutea de los cancioneros y romances de tradicioacuten renacen-tista No ha sido otra mi intencioacuten que la de rescatar del olvido unos escritos en prosa y en verso llenos de frescura y espontaneidad que nos muestran la pasioacuten con que la joven novicia se laquoentrega en cuerpo y almaraquo a los menesteres de su profesioacuten guiada por un padre espiritual en esos primeros antildeos de formacioacuten Esta ha sido la razoacuten por la que presento a continuacioacuten el citado manuscrito en su totalidad

Sor Nada (Mss 1295928)

laquoEsplicacion sobre en que consiste la paz del AlmaraquolaquoQuartillas a un Alma que padece soledad interiorraquo

[7 hojas utiles en 4ordm letra del siglo XVII]

+

Esplicacion sobre en que consiste la paz del Alma

Pareseme segun mi rudo entender que la verdadera paz del Alma con-siste en una muy pura y buena consiencia en un corason liso y bien intensionado en una verdadera rectitud de espiritu en el qual el Alma procura bolar a Dios sin jamas detenerse a respetos umanos ni reparar en que me diran ni de que me censuraran sino me apresuro a seguir a unos entenderes y pareseres dorados en los quales pretende el mundo engantildear y ensuciar si se puede la puresa de un corason unicamente de Dios y de su Santa ley y se lo conserva cristalino con la divina asis-tencia de la gracia y comprendido de su Amor y temor siguiendo la luz divina de tan amante Sentildeor Dios y ombre verdadero con que este ilustrado corason ni se altera ni se mueve por los disfrasses dorados que ase el mundo y sus moradores mayormente con falssas amistades aunque con ellos muestre buena intension Con la misma grasia y luz de Dios conose el buen corason estos disfrasses que le ase el mundo y se retira de todo con espiritu y valor esto sin la menor alterasion sino que en suma paz se retira a buscar a Dios dentro de su mismo corason

173ESPANtildeOLAS DE ULTRAMAR EN LA HISTORIA Y EN LA LITERATURA

y se abrasa con su pura verdad en la qual se le descubren mil interio-res secretos tan solidos puros y verdaderos que la misma Alma queda abismada y de puro grandes no los puede bien comprender ni esplicar pero estos mismos secretos divinos le sirven de espuelas para no solo correr sino bolar con pies de plumas en seguimiento de su bien ama-do Jesus y como este soberano Sentildeor es tan amante de sus espossas las Almas luego que la ve bolar con pies de plumas la sale al encuen-tro en despoblado campo que se deve de llamar Campo de Amor de Dios y el mismo Sentildeor se viene a las manos por ser Dios que nos ama con Amor infinito de Padre benigno y amoroso con que asiendose en contra deso este divino enamorado en lo interyor de el Alma que le busca con ansias de servirle y amarle y en aquella soledad traban una conversasion amorosa y sensilla como la pluma simple de quien esto escrive

Divino enquentroDios y el Alma en la soledad

O Soberano Principe de la paz dise el Alma tus perfumes me traen a ti bolando porque alla en el mundo y sus valedores me pretendian engantildear y entretenerme con pegaminossas amistades que facilmen-te me pudieran envenenar y matarme apartandome de ti Mi dulse Jesus amable mi Redentor Soberano que con tantas ansias me sales al enquentro como siervo [ciervo] erido de mis Amores los quales tu Amor me ofrese para que con tu mismo Amor te ame y te sirva en paz sin perturbarme ni contristarme ni cansarme de padeser pasando si se ofrese por escarchas nieves espinas ni abrojos ni por otros diverssos trabajos ni piedras de contradision que tu me puedes permitir pues por mas que el mar se levante con sus ferosses olas contra mi ni piedras se me tiren al rostro en todo Sentildeor me quieres con serenidad pasifica sin la menor perturbasion Todo Sentildeor quieres que lo tome con Serenidad de espiritu y asi vengo a ti bolando para que mejor me ensentildees a vivir segun las leyes de tu noble condision que me son muy agradables por mas que el mundo me las despresie por segir sus vanidades y torsidas intensiones con apariensias de bien y con este engantildeo y bien me quie-ro mas a mi que no a mi proximo veo que segun mi pareser se pierden muchas Almas y tambien de aquellos que se depresian y pasan por muy espirituales Con que me paresen pocos los que llegan a padeser con desnudes151 de espiritu por tu purisimo Amor y me parese essas se quedan muy atrasadas en la virtud por el peligro de bolver muy atras el paso de modo que se pueden despentildear y pereser en su misma desgra-sia ya por soberbia o por otras enfermedades que se les pega al corason y asi lo pasan como siegos ignorantes sin advertir en sus peligros

151 La letra en cursiva es miacutea

174 JUAN FRANCISCO MAURA

este aquerdo Sentildeor y otros que tu verdad me ensentildea me ase venir uyendo de las paredes del mundo y me vengo a ti Dios mio bolando con las dos Alas del Amor y temor que tu mismo Amor me ofrese tan de gracia y tan de grado que no se duentildeo mio con que lo responder a tan soberano beneficio y finesa de tus entrantildeas de Amorvengo Sentildeor y esposo mio unicamente a descansar en ti pues los peli-gros del camino me an puesto en mucho sobresalto temiendo el per-derte y sin ti perderme para siempre por una eternidad sin fin pues deseo amado mio ganarme ganandote a ti y vivir en ti aora en vida y despues eternamente y estos cuidados me traen fatigada molida y cansada y no podre tener alivio y descanso sino viendome entre tus brassos aunque sea estando en cruz pues ese es el fin de mis deseos vivir y morir en ti ablame mi cordero manso y ensentildeame a que ver-daderamente te ame como fiel esposa ea mi caro amigo dame la ma-no pues sabes Amor mio que en mi no ay mano sin tu misma mano y asi mi Dios y Sentildeor mi Principe Soberano con umilde rendimiento y deseos de alcansarte te suplico me des la mano y me consueles en estos mis trabajos Deseo Sentildeor vivir en paz y los malos amores de mi Naturaleza flaca no me dejan detentar y no quieren por mi desgrasia atropellar con las leyes de tu Amor ni quisiera perturbar mi corason quando me veo con un torvellino de olas y contratiempos que a menu-do me suelen sercar pero si tu Sentildeor me das la mano nada temo sino que me aseguro y vivire en paz sin que me fatiguen los contratiempos pues mi mano en la tuya y mi espiritu en el tuyo por mas borrascas que me envistan no seran bastantes para rendir mi voluntad a la suya bien si para pronunsiar un fiat que resuene bien atras en tus oidos y que en medio de mis fatigas me ponga a cantar tus divinas misericor-dias hea Sentildeor ya pretendo serrar mis labios por no desir mas bove-rias y deseo Sentildeor oir tus palabras de vida eterna abla Sentildeor que tu sierva oye con atension y cuydado mira mi Dios que se me ase tarde y espero con prisa deseando saborearme y aprovecharme de los ecos de tu Santa dotrina pues todas tus palabras saben a eterna vida callen pues mis sentidos y potensias y todo se ponga en paz pues mi dulse y soberano Sentildeor no se escusara de ablar me aun que en mudo silensio hea mi gran Prinsipe de la paz ablame que tus puros amores me traen perdida por estos asperos montes y mis cortos pasos no te pueden dar alcanse mirame mi Dios a tus pies postrada como un vil gusano y me-nor ormiga de la tierraabla Jesus y dise a su esposa el Alma querida esposa mia que me pides y por que te muestras tan fatigada y mal sufrida no vives como corde-rita del campo buscando de mis pechos el sustancial pasto mi Amor no te sustenta y mi grasia te promete eterna vida pues dime amada de que te fatigas y te muestras mal sufrida mira que te amo con Amor de padre y con Amor de esposo el mas fino y puro enamorado que no tan solo me presio de darte mi mano sino tambien todo mi cuerpo y

175ESPANtildeOLAS DE ULTRAMAR EN LA HISTORIA Y EN LA LITERATURA

sangre para que con mi pan de vida te sustentes y te regales a tus an-churas y que con mi propio espiritu vivas en paz como tu lo deseas y que mis amores sean unico alivio en tus trabajos en esta mortal vida pues si esto es asi y sabes que muero por darte vida dime esposa mia de que te fatigas Dame querida tus brassos y dime si me amas como yo te amoResponde el Alma152 Tu mi Dios sabes si yo te amo pues de mi solo se que mis deseos y ansias buelan a ti mas no alcanso a saber si te amo como tu de-seas ser amado y como desconfio tanto de mi y de mis prosederes falssos temo Dios mio perderme y perderte y asi Sentildeor pues no desechas mis Amores y te muestras tan fino en amarme te pido me ensentildees a vivir segun las leyes de tu pura verdad y fina condisionhija mia dise Dios la prueva de un verdadero Amor consiste en sufrir callar y padeser por mi unico Amor y en todo seguir mis pasos sin ja-mas retroseder por mas fragoso que se muestre el camino pues nunca seran tantas las espinas las escarchas ni las nieves ni los vientos bo-rrascosos que te se ofrescan pasar por mi Amor como los que mi tierno y desinteresado Amor paso por ti y siempre con mis pies descalssos y asi hija y esposa mia muestrate costante en seguir lo perfecto de mis passos pues mi braso fuerte sera en ti y peleara por ti y te sera el todo en tus nesesidades y mi Amor te convertira en dulse y suave lo amargo y molesto a la condision de la carrne

Responde el Alma

O mi enamorado Jesus O mi dulse y tierno amanteO alegria de los sielos O dulse Jesus amable

(Toda Sentildeor me derrito toda Sentildeor me desagoy quiero vivir por ti ea sentildeor abrasadme) [Tachado en el original]

Toda Sentildeor me derrito toda Sentildeor me desagoy quiero morir por vos ea Sentildeor que ya acabo

Ya tus amores me llaman ya tus perfumes me traencon suspiros y agonias Sentildeor asta que te alcanse

O mi Jesus amoroso no puedo mas dilatarmeya la pasiensia me falta dulse Jesus abrasadme

(No puedo vivir sin vos no puedo mas dilatarmeya la pasiensia me falta dulse) [Tachado en el original]

No puedo vivir sin vos mi dulse Jesus amablepues me teneis echisada siendo mi esposo y mi Padre

152 La aparicioacuten de una mayuacutescula al principio de una oracioacuten es algo totalmente arbitrario en este ma-nuscrito dada la libertad ortograacutefica de la autora Como se puede observar en la mayor parte de las veces no es el caso

176 JUAN FRANCISCO MAURA

Ay que me abraso Ay que me quemo del Amor deJesus nasareno como no tocan y tantildeen a fuego

Responde Jesus Hija mia tus simples vozes oygo y aunque resuenan bien a mis oidos pero te deseo mas mansa y pasifica en tus fervores ya sabes que no siempre as de vivir en mantillas ni a los pechos de tu Madre por que es rason que padescas con espiritu fuerte como mu-jer valerosa por que a una esposa del Rey soberano y prinsipe de la paz no le estan bien chiquerias ni fervores de nintildea malcriada y ya es ora que la destete su Madre la Naturaleza y que empesando su nueva vida camine con el favor de mi grasia sigiendo mis passos de eterna vida esto con sus pies descalssos segun mis leyes de Amor puro y desinteresado lo tienen ordenado153 y vivir en paz como lo deje en-cargado a mis apostoles Santos repitiendoles varias vezes Vivir en pas y caridad esto es un vivir en Dios y Dios en el Alma y asi hija mia el Alma que vive en paz vive en mi Como mis cortesanos en el cielo y pues me pides que te ensentildee a vivir segun las leyes de mi condision Repito el desir que te debes mostrar sufrida en todo tiempo y estado sin permitir en tu corason que ni aun los fervores se adelanten con estremos ni ademanes sino atiende y aprende de mi purisima Madre pues siempre la veras si bien lo consideras que mientras vivio en el mundo en todos sus trabajos se mostro firme fuerte costante como piedra diamante Pues mirandome nintildeo entre sus brasos desnudo en el pesebre desnudo y crusificado en los brassos de una cruz En estos y otros passos no se mudo su rostro sino que en suma serenidad y pasifico corason toda se sacrificaba enteramente en los brassos de mi Amor y rendido su corason y voluntad en la de mi eterno Padre por ejemplo te la doy y deseo que aprendas de sus nobles calidades pues te aseguro carisima que las leyes de mi condision y pura verdad todo lo allaras enserrado en el corason de mi purisima Madre sedle fiel y descansaras en paz

+

Quartillas a un alma que padese soledad interior

1Un Alma afligida y tristese ve en un campo desiertay en el su esposo la tieneAtormentada y sedienta

153 Es a traveacutes de estas liacuteneas lo que hace suponer que la autora de este diaacutelogo amoroso entre el Alma y Je-suacutes es novicia esto es laquoque estaacute empesando su nueva vidaraquo En las mismas liacuteneas una vez maacutes se hace alusioacuten al laquodesteteraquo de su vida civil laquoa una esposa del Rey soberano y principe de la paz no le estan bien chiquerias ni fervores de nintildea malcriada y ya es ora que la destete su Madre la naturalesaraquo (fol 5)

177ESPANtildeOLAS DE ULTRAMAR EN LA HISTORIA Y EN LA LITERATURA

2Pendiente se ve en el AyreSolo un hilo la sustentasin tocar el pie en el sueloporque del no tome tierra

3Mirandola esta yto a ytoaquel sol que la atraviesay la enviste con sus rayosmas ella no pestantildeea

4Como sigarra padese y como a tal se atormentabatiendo sus mismas Alasy el corason se atraviesa

5Con penas sustos temoresquando se mira assi mesmasin tener valor en nadaporque es la misma flaquesa

6Pero el Amor de su esposotoda su atension le llevay la pone en un abismopero cubierto en tiniebla

7Desea dar algun bueloy subir con ligeresapero se mira travadacon una fuerte cadena

8Clama suspira y padeseMas del todo se sujetaRindiendo su voluntadA la divina clemencia

9Los enemigos del AlmaCruelmente le asen guerray ella aunque firme y constantelos reselos la atormentan

178 JUAN FRANCISCO MAURA

10de todos modos padeseaunque gosa la asistensiadel divino esposo amadoque en su interior se recrea

11Solo de verla penary con verla tan serenadise resibe mil gustosde su sigarra pequentildea

12Le sabe el mundo a mil yelesy su trato le atormentaviendo en el mil falsedadesque todas saben a tierra

13Para poderse librardeja de correr y buelacon las Alas del Amory el mismo Amor se la lleva

Una vida dedicada a un amor divino un amor que le haraacute llenar un buen nuacutemero de cuartillas dedicadas a tan alta empresa Se desconoce si la vocacioacuten de Sor Nada con-tinuoacute con tanta intensidad el resto de sus diacuteas Ciertamente la vida en el covento no era faacutecil En algunos casos la experiencia era traumaacutetica incluso fatal para algunas de las adolescentes de la Ameacuterica Espantildeola Las reglas del claustro eran severas por varias razones Estas joacutevenes si no teniacutean el permiso de la superiora no podiacutean recibir visitas no podiacutean volver a sus casas su correspondencia era censuraba y no podiacutean salir del periacutemetro conventual Igualmente se levantaban antes del amanecer para oir misa tra-bajaban el resto del diacutea y lo maacutes interesante es que muchas veces esta vida era aceptada por muchas

Page 3: Tercera parte: Mujeres en la vida intelectual - …parnaseo.uv.es/Editorial/Maura/TerceraParte.pdf · La Biblia, por su parte, hace repetidas menciones de la mujer y sobre el comporta-

133ESPANtildeOLAS DE ULTRAMAR EN LA HISTORIA Y EN LA LITERATURA

que por ser vieja (que dicen pasaba de setenta antildeos) debieron de matarla que como baacuterbaros no atendieron a que era mujer y que por serlo mereciacutea estimacioacuten y respeto que son en lo natural por quien vivimos y somos que nos criacutean y dan leche cuando en los tiernos y primeros antildeos de nuestra vida no tenemos saber para velernos ni as-tucia ni mantildea para alimentarnos pero como gente que careciacutea de este discurso y razoacuten la mataron y dejaron en aquellos montes tan cua-jada de flechas como erizo de espinas Sintieacuteronlo mucho los nuestros y enterraacutendola por ser cristiana pasaron adelante que me parece que para ir con mucha prisa y mayor aacutenimo de alcanzar los enemigos llevaban por blanco la coacutelera y rabia de haber visto semejante espec-taacuteculo siendo cosa vil y apocada poner manos en mujer sino es de-masiadamente culpada y que cada cual propondriacutea en su corazoacuten de vengar la injuria como injusta y hecha a mujer flaca y sin resistencia (640-41 lib 5 cap 23)

El mismo Juan de Torquemada en otro de sus comentarios sobre ciertas disputas intestinas entre pueblos mejicanos dice laquoen especial las mujeres cuya lengua es maacutes feroz y cruel cuando la pasioacuten y la ira la gobierna y rigeraquo (177 lib cap 58) Lo que demuestra en cierta manera que la visioacuten general de la mujer no se limita a la de un ser indefenso por naturaleza sino diferente y digno de respeto no soacutelo por su delicadeza sino por su ferocidad

La tradicioacuten catoacutelica lleva a la identificacioacuten de la madre con la Virgen Mariacutea y el nintildeo Jesuacutes Esta identificacioacuten mariana ha formado parte del sentimiento de los espantildeoles desde su maacutes tierna juventud pasoacute a la Ameacuterica hispana y alliacute germinoacute de tal manera que hoy en diacutea se puede decir que el culto a la Virgen en Hispanoameacuterica supera en muchos casos a cualquier otra forma de identificacioacuten a nivel poliacutetico religioso o inclu-so deportivo

Es necesario ver cuales son las raiacuteces maacutes profundas del trato y concepto que se ha te-nido de la mujer en Espantildea asiacute como la incidencia de ciertas obras clave para entender esta determinada forma de ser y de pensar Sin pretender hacer un estudio socioloacutegico ni antropoloacutegico del tratamiento que los pueblos agriacutecolas dieron a los miembros de sus sociedades vale la pena tener en cuenta que hasta hace muy poco en el caso de Espantildea la agricultura junto con la religioacuten han sido el eje sobre el que han girado la mayor parte de las manifestaciones sociales muacutesica danza ceremoniales literatura supersticiones etc Espantildea paiacutes tradicionalmente agriacutecola y marinero con una poblacioacuten urbana rela-tivamente pequentildea especialmente en Castilla basoacute sus modelos principalmente en las ensentildeanzas grecolatinas y en la Biblia Para ser maacutes exactos durante la Edad Media el pensamiento escolaacutestico reinante supo sincretizar magistralmente la manera de pensar de Aristoacuteteles con las laquoSagradas Escriturasraquo Este laquosincretismoraquo seraacute igualmente utiliza-do maacutes tarde para adaptar el pensamiento cristiano con las religiones amerindias Aris-toacuteteles y la Biblia seraacuten pues dos referencias fundamentales a la hora de interpretar la idiosincrasia femenina Los principales intelectuales y teoacutelogos de la eacutepoca Sahaguacuten Las Casas Sepuacutelveda Duraacuten Montesinos etc mencionaraacuten a cada momento al laquofiloacute-soforaquo y su palabra seraacute siempre tenida en cuenta La iglesia catoacutelica seraacute por lo tanto el vehiacuteculo utilizado para llevar a cabo tal adoctrinamiento en las tierras descubiertas de

134 JUAN FRANCISCO MAURA

la misma forma que se habiacutea venido haciendo secularmente en tierras peninsularesAristoacuteteles en su Poliacutetica obra traducida al latiacuten en el siglo XIII por Santo Tomaacutes de

Aquino hace mencioacuten de la mujer junto con los esclavos y de la idea que de eacutestas te-niacutean los laquono griegosraquo

1252a34 Nature then has distinguished between female and slave she recognizes different functions and lavishly provides different tools not an all purpose tool like the Delphic knife for every instrument will be made best if it serves not many purposes but one But non-Greeks as-sign to female and slave exactly the same status (57 lib1 cap 2)

La Biblia por su parte hace repetidas menciones de la mujer y sobre el comporta-miento que eacutesta debe seguir en la sociedad de sus obligaciones y derechos para con su marido y demaacutes menesteres de tipo socioloacutegico que tienen como base comuacuten la familia en su calidad de centro de la sociedad judeo-cristiana El tono general sobre la mujer variacutea seguacuten los diferentes libros biacuteblicos Como norma se suele presentar un tono de subordinacioacuten al marido y en algunos casos de absoluto desprecio principalmente en el Antiguo Testamento Sirva de ejemplo este pasaje de Ester laquoTuacute lo sabes todo y sa-bes por lo tanto coacutemo aborrezco la gloria de los inicuos y detesto el lecho de los incir-cuncisos y de todos los extrantildeos Tuacute conoces que soacutelo por necesidad estoy donde estoy que detesto las sentildeales de mi gloria que llevo sobre la cabeza en los diacuteas de mi puacuteblica presentacioacuten que las abomino como pantildeo de menstruacioacutenraquo (Ester 14 15-17)

En el laquoDeuteronomioraquo aparece otro singular ejemplo del papel de la mujer en situa-ciones tan comunes como una pelea entre dos hombres Si bien en este caso la mujer en cuestioacuten es capaz de coger de los genitales al enemigo de su marido durante la con-tienda el castigo que se solicita para la mujer es desproporcionado e inhumano laquoiexclSi mientras rintildeen dos hombres uno con otro la mujer del uno interviniendo para librar a su marido de las manos del que le golpea agaacuterrase a eacuteste por las partes vergonzosas le cortaraacutes las manos sin piedadraquo (Deuteronomio 25 11-13)

En los proverbios se cita un ejemplo maacutes ilustrativo auacuten de la capacidad de la mujer laquolascivaraquo de atraerse con todo tipo de insinuaciones amorosas la atencioacuten de un laquopobreraquo marido ingenuo e indefenso ante tan manifiestas provocaciones Resulta interesante observar sobre todo coacutemo se presenta a la mujer a modo de una serpiente que encanta con sus provocaciones y su astucia a una viacutectima indefensa laquosimple y falto de juicioraquo

Era el atardecer cuando yaobscureciacutea al hacerse de nocheen la tinieblaY he aquiacute que le sale al en-cuentro una mujer con ataviacuteo deramera y astuto corazoacutenEra parlanchina y procaz ysus pies no sabiacutean estarse en casaahora en la calle ahora en la plaza acechando por todas las esquinasAgarrole y le besoacute y le dijo

135ESPANtildeOLAS DE ULTRAMAR EN LA HISTORIA Y EN LA LITERATURA

con toda desverguumlenzaTeniacutea que ofrecer un sacri-ficio y hoy he cumplido ya mis votosPor eso te he salido al encuentro iba en busca de ti y aho-ra te halloHe ataviado el lecho con ta-pices con telas de hilo recamadode EgiptoHe perfumado mi caacutemaracon mirra aacuteloe y cinaacutemonoVen embriageacutemonos deamores hasta la mantildeana harteacute- monos de cariciasPues mi marido no estaacute encasa ha salido para un largoviajeSe ha llevado la bolsa y no volveraacute hasta el plenilunioCon la suavidad de sus pala-bras le rindioacute y con sus halagos le sedujoY se fue tras ella entonteci-do como buey que se lleva almatadero como ciervo cogido enel lazoHasta que una flecha le atra-viesa el hiacutegado o como paacutejaro que se precipita en la red sin saber que le va en ello la vida (Proverbios 7 9-24)

El laquopobre paacutejaroraquo cayoacute en la red hipnotizado por la serpiente Desde el laquoGeacutenesisraquo hasta laquoMalaquiacuteasraquo esto es desde el principio al fin del Antiguo Testamento se puede apreciar en menor o mayor grado la misoginia cararacteriacutestica de una sociedad pa-triarcal Seriacutea prolijo citar todos aquellos pasajes donde esto se confirma siendo tal vez los siguientes algunos de los maacutes representativos laquoEl varoacuten no debe cubrir la cabeza porque es imagen y gloria de Dios mas la mujer es gloria del varoacuten pues no procede el varoacuten de la mujer sino la mujer del varoacuten ni fue creado el varoacuten para la mujer sino la mujer para el varoacutenraquo (Corintios 11 7-10) El proacuteximo fragmento hace referencia a la laquomujer disolutaraquo Para que te guarden de la mala mujer de los alagos de la mujer ajena No codicies su hermosura en tu corazoacuten no te dejes seducir por sus miradas Porque si la prostituta busca un pedazo de pan la casada va a la caza de una vida preciosa iquestPuede llevar uno fuego en su regazo sin quemarse los vestidos (Proverbios 6 24-28)

136 JUAN FRANCISCO MAURA

No es difiacutecil imaginar la repercusioacuten de esta argumentacioacuten si se hace de ella una inter-pretacioacuten literal sobre todo ante un pueblo de mayoriacutea analfabeta o poco instruida

Claro estaacute que seriacutea absurdo querer hacer un anaacutelisis literal de las palabras de las laquoSa-gradas Escriturasraquo Sin embargo eacutestas han influido e influyen en la sociedad occidental a un nivel maacutes elevado de lo que comuacutenmente se piensa a veces de manera incons-ciente De cualquier manera sin entrar en una comparacioacuten teoloacutegica entre el Yaveacute del Antiguo Testamento y Jesucristo en el Nuevo Testamento la diferencia que se hace del elemento femenino entre estos dos libros es laquonotableraquo Dice Yaveacute a Sauacutel laquoNo perdones mata a hombres mujeres y nintildeos aun los de pecho bueyes y ovejas camellos y asnosraquo Forma de pensar eacutesta que no concuerda con el laquoamor al proacutejimoraquo del Nuevo Testamen-to donde la venganza y el odio pasan a ser amor y resignacioacuten

En la Edad Media espantildeola existieron algunas leyes que teniendo como objeto a la mujer dejan entrever el derecho y las limitaciones con que eacutestas contaban en caso de abuso por parte de los hombres Un ejemplo de estos derechos o laquofuerosraquo podiacutean ser muy bien los de Jaca otorgados en el antildeo de 1077 por el rey Sancho Ramiacuterez Estos fueros en opinioacuten de Antonio Ubieto Arteta laquose extendieron a muchas poblaciones de Espantildearaquo Veacuteanse las siguientes claacuteusulas laquoK) Si alguien faltase con mujer con el consen-timiento de ella no siendo casada no pagariacutea multa pero si usase violencia deberiacutea tomarla por esposa o proporcionarle marido L) La mujer ultrajada deberaacute pedir justicia en los dos primeros diacuteas inmediatos a su deshonra presentando testigos Si pasan los tres primeros diacuteas sin reclamar ya no tendraacute derecho (Ubieto 135-36)

Observar el desarrollo que fue teniendo el papel de la mujer dentro de la sociedad especialmente de la espantildeola resulta sin duda interesante desde un punto de vista so-cioloacutegico Gracias a ello podremos comprender mucho mejor el posterior desarrollo de su participacioacuten en los acontecimientos de la eacutepoca que las tocoacute vivir y su posterior proyeccioacuten en el Nuevo Mundo siempre teniendo en cuenta el margen maacutes o menos estrecho que la Iglesia Catoacutelica y la mentalidad de la eacutepoca impusieron en mayor o menor grado a lo largo de diferentes periacuteodos Es por eso por lo que debemos indagar maacutes profundamente en todo lo relacionado con la actuacioacuten de la mujer en tierras de ultramar y sobre todo valorar sus acciones no como hechos marginales y esporaacutedicos sino como la base y los cimientos de una sociedad que todaviacutea sigue viva Son las voces de estas mujeres aquellas que se han podido rescatar el mejor testimonio Fueron las madres de los espantildeoles del siglo XVI dice Fernaacutendez Duro las que hicieron posible que en tan corto nuacutemero de antildeos se hiciese un derroche tan formidable de energiacutea en todos los mares y continentes de nuestro planeta

iexclQueacute grandeza queacute arrojo el de Espantildea en el siglo XVI Jamaacutes vio el Mundo energiacutea actividad y fortuna semejantes Para los espantildeoles no habiacutea obstaacuteculos en los riacuteos en las montantildeas ni en los desiertos Jun-taacutebanse unos cuantos creaban escuadras conquistaban imperios y fundando ciudades discurriacutean el modo de unir los mares y los climas Diriacutease que eran de procedencia de gigantes o de semidioses Eraneran hijos de tales madres (Duro 26)

Garcilaso de la Vega El Inca (1536-1616) cronista peruano hijo de un capitaacuten espantildeol y de una princesa inca tambieacuten se hace eco en su obra Historia general del Peruacute (segunda parte de sus Comentarios Reales) de la opinioacuten de algunas sentildeoritas que pasaron al Nuevo

137ESPANtildeOLAS DE ULTRAMAR EN LA HISTORIA Y EN LA LITERATURA

Mundo con la idea de encontrar al hombre de sus suentildeos en este caso al conquistador llevaacutendose una gran sorpresa al comprobar coacutemo las heridas las inclemencias del tiem-po y las enfermedades habiacutean dejado sus huellas en los rostros de estos hombres que no eran como se los imaginaban Este fue el comentario de una de las doncellas casade-ras que llevoacute don Pedro de Alvarado a Guatemala

iquestDicen que nos hemos de casar con estos conquistadores dixo una dixo otra iquestcon estos viejos podridos nos habiacuteamos de casar caacutesese quien quisiere que yo por cierto no pienso casar con ninguno dellos dolos al diablo parece que escaparon del infierno seguacuten estaacuten de estro-peados Unos cojos otros mancos otros sin orejas otros con un ojo otros con media cara y el mejor librado la tiene una dos y tres vecesraquo Dijo la primera laquoNo hemos de casar con ellos por su gentileza sino por heredar los indios que tienen que seguacuten estaacuten de viejos y cansados se han de morir presto y entonces podremos escoger el mozo que qui-sieacuteremos en lugar del viejo como suelen trocar una caldera vieja y rota por otra sana y nueva (Garcilaso vol 2 lib 2 cap 1 80)

Al escuchar estas palabras un caballero que se encontraba al otro lado de la cortina donde estaban hablando no pudieacutendolo sufrir maacutes las afrentoacute pasando luego a decir-les a los caballeros los laquobuenos deseosraquo de las damas Se marchoacute a su casa llamoacute a un cura y se casoacute con una india con la que ya teniacutea dos hijos a los que legitimoacute para que no pasasen a ser esclavos o criados de ninguna de esas sentildeoras (Garcilaso vol 2 lib 2 cap 1 81)

Muchas de estas primeras mujeres pasaron a ser viudas varias veces a causa precisa-mente de la muerte del marido en las diferentes campantildeas de los primeros antildeos

Fueron las descendientes de las mujeres que vinieron con los conquistadores las que de una manera definitiva asentaron las raiacuteces de una nueva sociedad que llegariacutea al mismo esplendor y refinamiento que la de la metroacutepoli El trasplante ya estaba realiza-do La violencia del laquoencuentroraquo de los primeros antildeos habiacutea dado como fruto una nueva sociedad que habiacutea heredado las bases de la cultura espantildeola y que teniacutea ademaacutes todo el encanto y riqueza de las variadiacutesimas culturas precolombinas

La primera generacioacuten corresponde ya a la mujer criolla hija de pobla-dora aquella que educoacute a los hijos propios y a los ajenos suavizando las costumbres baacuterbaras de la eacutepoca belicista Lo cierto es que a pesar de todas las vicisitudes la mujer hizo posible la creacioacuten del hogar en el que se fraguoacute la transculturacioacuten la sociedad gracias a su presencia fue perdiendo vulgaridad hasta alcanzar un notorio refinamiento Aun-que la paz tardoacute en llegar las treguas favorecieron el asiento en villas y ciudades En ellas florecioacute el romancero y la copla medieval junto a la arquitectura goacutetica el balcoacuten canario y el patio andaluz (Borges 436)

Ya fuese en la ciudad de Meacutexico o en la de Lima la mujer criolla gustaba de todas aquellas sofisticaciones que podiacutean disfrutar las mujeres de Sevilla o de la corte To-das teniacutean ademaacutes criados A mediados del siglo XVI empezaraacuten las navegaciones en-tre Meacutejico y las Filipinas lo que contribuiraacute a enriquecer los atuendos de las mujeres criollas asiacute como espantildeolas con artiacuteculos tan exoacuteticos en su diacutea pero tan castizos hoy

138 JUAN FRANCISCO MAURA

como el mantoacuten de Manila o el abanico Fray Reginal de Lizaacuterraga dice sobre las mu-jeres del Peruacute

La criolla es ademaacutes mujer que gusta de la ostentacioacuten y del lujo vi-cios muy femeninos que en parte la compensaban de pasadas o futu-ras calamidades En el Peruacute el vestuario se hizo tan ostentoso laquoque casi no se sabe coacutemo lo pueden sufrir los maridosraquo La soberbia de ellas es demasiada y no sabemos en lo que ha de parar no creo que hay en lo descubierto del mundo ciudad en su tanto ni cuatro veces mayor que a tanta soberbia en este particular como esta nuestra ciudad llegueCon justo tiacutetulo se podriacutea moderar por los virreyes esta soberbia Pe-ro no seacute por queacute no se modera y siacute seacute por queacute ni los maridos tienen aacutenimo para moderarlo ni los gobernadores tampoco (Lizaacuterraga 38 lib 1 cap 51)

La mujer criolla participa en todos los aconteceres de su sociedad Estaacute presente en todos los acontecimientos sociales y con frecuencia econoacutemicos sin dejar por ello de controlar la vida del hogar Al igual que en Espantildea ellas se encargaraacuten de casar a sus hijas e hijos unos destinados a mantener la tradicioacuten familiar y enriquecerla otros a engrosar las filas de la iglesia

Mujeres en la vida intelectual espantildeola durante los siglos XVI y XVII131

Great genuine and extraordinary work can be done only in so far as its author disregard the method the thoughts the opinions of his contemporaries and quietly works on in spite of their criticism on his side despising what they praise No one becomes great without arrogance of this sort (Shopenhauer The Art of Literature)

De igual manera que se ha querido excluir a la mujer de las primeras paacuteginas del encuentro con el Nuevo Mundo otro tanto ha ocurrido con la labor intelectual de tan insignes mujeres Muchas pese a lo remoto de sus asentamientos lograron dar a luz los maacutes valiosos frutos de la poesiacutea liacuterica de su tiempo132 Un gran nuacutemero de estas mujeres dada la estratificacioacuten social de su eacutepoca desarrolloacute su labor en conventos Otras sin embargo hicieron lo mismo compaginando sus vidas matrimoniales con las tareas culturales La vida monacal daba ventaja en cierta forma a la hora de conseguir la independencia deseada para dedicarse por completo al mundo de las letras sin que un

131 Veacutease mi artiacuteculo laquoCara y cruz de la mujer hispana imaacutegenes del siglo XVIraquo132 Veacutease el ejemplo de Mariacutea de Alvarado la Amarilis de Lope de Vega que escribioacute su obra en los maacutes

apartados rincones de los Andes peruanos Veacutease Meneacutendez y Pelayo Marcelino Historia de la Poesiacutea Hispano-Americana 84

139ESPANtildeOLAS DE ULTRAMAR EN LA HISTORIA Y EN LA LITERATURA

marido o unos hijos se interpusiesen en el tiempo concentracioacuten y dedicacioacuten que una actividad artiacutestica requiere Pese a todo no siempre fue asiacute El maacutes conocido ejemplo lo tendriacuteamos en Sor Juana Ineacutes de la Cruz la cual tuvo que sufrir problemas con algunos altos cargos eclesiaacutesticos asiacute como envidias de propios y extrantildeos por ser entre otras cosas superior en inteligencia y cultura a la mayor parte de sus contemporaacuteneos

Muchos conventos estaban bien provistos de libros a menudo donados por aquellas familias que teniacutean alguacuten miembro dentro del convento o simplemente por simpati-zantes de las diferentes oacuterdenes religiosas En la paz del claustro algunas de estas mu-jeres llegaron a adquirir un formidable desarrollo intelectual Pero a pesar de la calidad del material que existe sobre tan insignes mujeres se las ha preferido mantener en la oscuridad Como deciacutea con ironiacutea el pensador espantildeol Benito Feijoacuteo (1676-1764) sobre las disputas entre hombres y mujeres laquoLo cierto es que ni ellas ni nosotros podemos en este pleito ser jueces porque somos partes y asiacute se habiacutea de fiar la sentencia a los aacutengeles que como no tienen sexo son indiferentesraquo (46)

El escritor argentino Vicente G Quesada ya se quejaba a principios del presente si-glo de la pobriacutesima informacioacuten que ofreciacutea la enciclopedia francesa Larousse sobre la vida colonial en Meacutexico cuando refirieacutendose a eacutesta deciacutea lo siguiente laquoLos uacutenicos libros que se conociacutean eran el almanaque el catecismo del P Ripalda el Antildeo cristiano la vida de los santos y otros de ese geacuteneroraquo (Quesada 125) El mismo autor refutando lo anterior escribe

Por uacuteltimo recordareacute la notabiliacutesima publicacioacuten moderna La Bibliogra-fiacutea mejicana del siglo XVI eruditiacutesima y que constituye el maacutes concluyen-te testimonio para desautorizar la ligereza del Dictionnaire de Larousse que afirma lo que ignoraEl celebrado escritor mejicano don Francisco Pimentel ha publicado su erudita obra Historia criacutetica de la literatura y las ciencias en Meacutejico desde la conquista hasta nuestros diacuteas es un trabajo que comprende cuatro partes divididas asiacute Novelistas oradores historiadores y autores cientiacuteficos Por esta breve relacioacuten se comprende que es temeridad indisculpable pretender dar noticias del movimiento intelectual en el virreinato de Meacutejico sin conocer las obras de Pimentel y de Garciacutea Icaz-balceta ni la edicioacuten primitiva o corregida de Beristain (126)

En los maacutes importantes nuacutecleos urbanos de Meacutexico y Peruacute se podiacutea apreciar clara-mente la participacioacuten directa de la mujer en las maacutes diversas actividades sociales y cul-turales Esta participacioacuten llegoacute incluso al extremo de algunas mujeres que insultaron li-teralmente a las autoridades competentes cuando lo creyeron necesario laquoEstas mujeres que lloran seriacutean las mismas que creyeron como causa principal de aquellas muertes las disposiciones de las Leyes Nuevas porque no tuvieron empacho de insultar al virrey Blasco Nuacutentildeez Vela a quien lsquodieron gritasrsquo (sic) las espantildeolas y lo maldijeron como si llevara consigo la ira de Diosraquo (Borges 52) Lo mismo ocurre en la peniacutensula Dentro del plano cultural durante la primera mitad del siglo XVII destacaraacute entre los escritores de su tiempo Mariacutea de Zayas y Sotomayor gran novelista y defensora de los atributos de su sexo cuya obra narrativa y dramaacutetica disfrutoacute de una gran popularidad en la peniacuten-sula asiacute como en Hispano-Ameacuterica laquoCasi no ha habido novelista maacutes simpaacutetico a los lectores espantildeoles que Dontildea Mariacutea de Zayas seguacuten las muchas reimpresiones que se han hecho de sus obrasraquo (E Fernaacutendez de Navarrete xcvii) Entre sus admiradores contoacute

140 JUAN FRANCISCO MAURA

con el infatigable y genial Lope de Vega que la elogioacute en su obra El laurel de Apolo laquoNo desaprovechoacute Dontildea Mariacutea ninguna ocasioacuten de abogar por las mujeres contra la tiraniacutea de los hombres suponiendo que como deacutespotas las quieren ignorantes para tenerlas sujetasraquo (E Fernaacutendez de Navarrete xcvi)

Pero no tiene que ser exclusivamente una mujer la que defienda los atributos y los derechos de su sexo Se podriacutean citar varios ejemplos donde desde los inicios de las letras espantildeolas la mujer aparece comprendida e incluso defendida por escritores con-temporaacuteneos Veacuteanse los siguientes versos escritos en el siglo XIV por el genial Arcipres-te de Hita

Mujeres abrid los oiacutedos y escuchad una buena leccioacuten escuchad estas palabras guardaos del varoacuteniexclGuardaos no os acaezca como el leoacutenal asno sin orejas y sin su corazoacuten(892)133

No se puede despreciar la influencia que tuvo en la Espantildea del siglo XVI Erasmo de Roacutetterdam el intelectual maacutes reputado de su tiempo Erasmo con una clarividencia mental poco comuacuten trata de los temas maacutes cotidianos asiacute como de los maacutes profun-dos Sus escritos siempre al borde de lo hereacutetico dejaron bien claro su independencia ideoloacutegica Tambieacuten supo dar su opinioacuten sobre las mujeres y de la importancia que una buena educacioacuten supondriacutea a la hora de llevar a cabo las tareas diarias

With regard to female education Erasmus is unequivocal In Abbatis et eruditae he categorically states that education and learning are as desirable in a woman as in a man And although there is naturally no suggestion that the education and learning should be directed towards a career there are no carping restrictions as to what the education should consist of or where the learning should end (McKendrick 9)

Fue una mujer en particular la que llamoacute la atencioacuten del erudito holandeacutes Catalina de Aragoacuten hija de Isabel la Catoacutelica Grandes debieron ser las virtudes de esta dama cuando tan renombrados laquolibrepensadoresraquo la calificaban como laquomilagro del aprendi-zaje femeninoraquo

At the centre of the movement was a Spanish woman Catherine of Aragon first wife of Henry VIII of England Her mother Isabel la Catoacutelica had made sure that Catherine and her sisters received an advanced and enlightened education under two eminent Italian hu-manists Antonio and Alessandro Geraldini and Catherine herself was considered by Erasmus and Sir Thomas Moore to be a miracle of fe-male learning At her request Juan Luis Vives between 1524 and 1528 wrote his De institutione feminae christianae for her daughter Mary and he dedicated it to Catherine (McKendrick 6)

La pobre Catalina ya presagiaba su triste final Existe una dramaacutetica y muy poco co-nocida carta conservada en la Academia de la Historia donde eacutesta escribe a su sobrino el emperador Carlos V pidieacutendole ayuda y proteccioacuten a su desesperada situacioacuten en Inglaterra

133 Juan Ruiz Libro de Buen Amor 193

141ESPANtildeOLAS DE ULTRAMAR EN LA HISTORIA Y EN LA LITERATURA

Muy alto y poderoso sentildeor por las letras que a vuestra magestad e escrito a visto el tenor que siempre en este my negocio e tenido agora que veo el peligro que tanto tiempo lo e esperado torno a suplicar lo mismo que asta agora e echo y es que por permisioacuten de dios y por el deudo y sangre que entre vuestra magestad y my ay quiero de vos es-pecial memoria del peligro en que estoy y de los ynconvenientes que se espera allende que dios muy grande mire para ofendido si el Rey my sentildeor pone en efecto lo que todo este reyno tome en este parlamento de todo lo que para estar informado vuestra magestad por su embaxa-dor que aquiacute reside para el remedio tengo esperanza en dios bastaraacute lo que vuestra alteza proveeraacute conque se aga con tiempo no tengo maacutes que decir sino que todo ese reyno y maacutes los perlados y doctas personas que en esta causa defienden estaacuten muy sentidos de la dilacioacuten que su santidad del papa en este negocio a dado y quexanse mucho dello pues por vuestra parte nunca sino justicia se le a demandado y estaacuten el diacutea de oy tan firmes como asta agora para averlo de declarar donde fueren y debe ser entyendese esto poniendo la question como puacuteblicamente se platica que para en lo secreto no ay necesidad de ablar en ello y crea vuestra magestad de que esta verdad y dios me sostienen porque para proseguir mis trabajos no vastaraacute cuerpo humano y confiando en eacutel le suplico guarde la vida de vuestra magestad y acreciente su estado como yo deseo Degramache a 11 de enero= Humilde tiacutea de vuestra magestad= Catalina (RAH Atoacutegrafo precioso Caja 3 Nuacutem 23 Dontildea Catalina de Aragoacuten Reina de Inglaterra Antildeo 1530 Carta al emperador Carlos V pidieacutendole proteccioacuten)

La pobre Catalina presagiaba su triste fin ya que seis antildeos despueacutes la que fuera hija menor de los Reyes Catoacutelicos pasariacutea a mejor vida El no haber podido dar un hijo he-redero al rey Enrique VIII hizo que eacuteste se casase con Ana Bolena declarando nulo su matrimonio anterior sin consentimiento del Papa Roma le excomulgoacute pero eacutel mismo se proclamoacute jefe de la iglesia anglicana A pesar de todo Catalina muere enamorada de su marido y estas uacuteltimas liacuteneas con las que termina su uacuteltima carta y su vida son sufi-cientemente expliacutecitas laquoJuro que sobre todas las cosas mis ojos desean volver a verosraquo (Ximeacutenez de Sandoval 131)

Pese a la enorme influencia directa o indirecta que Erasmo tuviese sobre los pensado-res de la Espantildea del siglo XVI no debemos dejar de destacar tambieacuten la de Fray Luis de Leoacuten tanto por su cariz independiente como por ser un defensor de la libertad indivi-dual Auacuten siendo un representante de la iglesia Catoacutelica tuvo como se sabe que sufrir sus criacuteticas y el rechazo a la exposicioacuten de sus ideas escritos y traducciones biacuteblicas Fray Luis en su obra La perfecta casada deja clara su idea sobre la mujer y la funcioacuten que eacutesta debiacutea ocupar en la sociedad que le tocoacute vivir Para Fray Luis la mujer no era una imagen idealizada del laquoamor corteacutesraquo como la de los escritores neoplatoacutenicos sino un ser de carne y hueso con derechos y responsabilidades en la sociedad de igual manera que el hombre (McKendric 10)

Seriacutea exagerado afirmar que Fray Luis de Leoacuten pone a la mujer por encima del hom-bre en el contexto social Sin embargo y siempre teniendo en cuenta las limitaciones a

142 JUAN FRANCISCO MAURA

las que su profesioacuten y su tiempo le obligaban procura dejar claro que la mujer (casada) merece todo el respeto y ayuda que sea posible de su marido

Porque aunque es verdad que la naturaleza y estado pone obligacioacuten en la casada como decimos de mirar por su casa y de alegrar y des-cuidar continuamente a su marido de la cual ninguna mala condicioacuten de eacutel la desobliga pero no por eso han de pensar que ellos tienen licencia para serles leones y para hacerlas esclavas antes como en todo lo de-maacutes es la cabeza el hombre asiacute todo este trato amoroso y honroso ha de ser principio del marido Porque ha de entender que es compantildeera suya o por mejor decir parte de su cuerpo (Fray Luis de Leoacuten 21 cap 3)

En el reciente estudio de Mar Martiacutenez Goacutengora Discursos sobre la mujer en el Huma-nismo renacentista espantildeol se presenta esa posicioacuten ambigua del fraile agustino en refe-rencia a la funcioacuten de la mujer en la sociedad renacentista

Fray Luis se opone a la funcioacuten otorgada en la eacutepoca a la mujer de mera imagen pasiva Sin embargo fray Luis totalmente encardinado en la cultura del Renacimiento es consciente de la imposibilidad de ignorar ciertos presupuestos De ahiacute la frecuencia en la que el autor anima a las mujeres a buscar una laquofamaraquo puacuteblica que soacutelo una voz masculina puede proveerles Si la mujer desempentildea perfectamente su funcioacuten de casada el marido recibiraacute honra haciendo posible para ella ser alabada por los miembros de la comunidad (187)

Ya se ha mencionado a Isabel la Catoacutelica como impulsora de toda la empresa ultra-marina pero es precisamente gracias a su influencia cuando se pone de moda entre di-versas damas de su tiempo mdashsiglos XV y XVImdash la praacutectica de ciertos estudios y ciencias Beatriz Galindo conocida popularmente como laquoLa latinaraquo fue la que ensentildeoacute latiacuten a la reina Isabel Dice Juliaacuten Juderiacuteas en su obra La Leyenda Negra laquoA los hombres se unen las mujeres en este afaacuten de saber y vemos a Dontildea Beatriz Galindo maestra de latiacuten de la Reina a dontildea Luciacutea de Medrano que explicoacute los claacutesicos en Salamanca a dontildea Fran-cisca de Lebrija que desempentildeoacute una caacutetedra de retoacuterica en la Universidad de Alcalaacuteraquo (Juderiacuteas 74)

Nos cuenta Eustaquio Fernaacutendez de Navarrete que a la muerte del ceacutelebre Antonio de Nebrija quien a impulsos de la reina catoacutelica publicase la primera gramaacutetica europea en lengua romance su hija Antonia le supliacutea en las clases de filosofiacutea y retoacuterica en la Uni-versidad de Alcalaacute cuando eacuteste se encontraba ya viejo y enfermo (xcvi)

No existe ninguna razoacuten para pensar que las las mujeres de clases maacutes favorecidas que pasaron al Nuevo Mundo no disfrutaran de los mismos beneficios y libertades que sus homoacutelogas peninsulares Seraacute preciacutesamente uno de los hijos del mismo Antonio de Nebrija el doctor Sancho de Lebrija quien se encargue de dar poder a Antoacuten Pareja sastre para que la obra escrita de su padre tanto en latiacuten como en romance se distri-buya y venda laquoasiacute en Indias como en otras partesraquo (AHPS Libro del antildeo 1536 Oficio IV Fragmento de un libro Escribaniacutea Cristoacutebal Becerra Folio Primer tercio del legajo Fe-cha 31 de diciembre) En cuanto a las clases menos favorecidas la monarquiacutea espantildeola se preocupoacute desde un primer momento de alfabetizar a todos sus suacutebditos hembras y varones incluyendo los naturales de los territorios conquistados

143ESPANtildeOLAS DE ULTRAMAR EN LA HISTORIA Y EN LA LITERATURA

La educacioacuten de los indiacutegenas americanos fue una sincera preocupa-cioacuten de los reyes de Espantildea casi desde el descubrimiento del Nuevo Mundo Entre las primeras instrucciones de los Reyes Catoacutelicos a sus gobernadores de las Islas Antillas figuran las dadas a Nicolaacutes de Ovan-do en 1503 ordenaacutendole levantar en cada pueblo una escuela junto a la iglesia laquoen la que todos los nintildeos que hubiere en cada una de dichas poblaciones se junten dos veces al diacutea para que alliacute el capellaacuten les ensentildee a leer y a escribirraquo (Vega 9-10)

En la obra renacentista de Cristoacutebal de Villaloacuten El Crotaloacuten se ofrecen unas imaacutegenes muy graacuteficas de las mujeres de la eacutepoca y del laquoexceso de libertadraquo que seguacuten el autor en boca de uno de sus personajes disfrutaban Desde el punto de vista antropoloacutegico y social las siguientes liacuteneas ofrecen una buena imagen de la apariencia fiacutesica de las mujeres de su tiempo y de su actitud vista desde la perspectiva parcial del personaje de la obra

Pues aun no pienses Demophon que la vanidad y perdicioacuten destas livianas mujeres se le ha de pasar a Dios sin castigo que yo te oso afirmar por cosa muy cierta y que no faltaraacute Que por ver Dios su disolucioacuten desenvoltura desverguumlenza y poco recogimiento que en ellas en este tiempo hay visto que asiacute viacutergenes como casadas viudas y solteras todas por un comuacuten viven muy suelta y muy disolutas en su mirar andar y meneo muy curiosas y que por la calle van con un cu-rioso paso en su andar descubierta su cabeza y cabello con grandes y deshonestas crenchas muy alto y estirado el cuello guintildeando con los ojos a todos cuantos topan haciendo con sus cuerpos lascivos meneos (Villaloacuten 860-61 vol 2 canto 20)

El pasaje antes citado pese a parecer humoriacutestico en nuestros diacuteas no lo era tanto en la eacutepoca en que fue escrito ya que la visioacuten de la mujer como parte integrante del pa-trimonio del padre o del marido podiacutea de alguna manera poner en juego laquola honraraquo de su posesor Pese a esto se aprecia como la mujer teniacutea cierto margen de libertad que no se limitaba a las caacutemaras de un convento o a una vida totalmente alejada del mundanal ruido En la siguiente cita continuacioacuten de la anterior se puede observar la serie de ac-cesorios y aderezos que las mujeres de la eacutepoca utilizaban en sus vestidos y cuerpos llamando la atencioacuten la complejidad y sofisticacioacuten de los atuendos descritos

Por esta su comuacuten deshonestidad se cierto que vendraacute tiempo en el cual ha de hacer Dios un gran castigo en ellas pelarse han todos sus cabellos hacieacutendolas a todas calvas y seraacute tiempo en que les quitaraacute Dios todos sus joyeles sortijas manillas zarcillos collares ajorcas y apretadores de cabeza Quitarles ha los partidores de crenchas tenaci-cas salsericas redomillas y platericos de colores y todo geacutenero de afei-tes sahumerios guantes adobados sebos y unturas de manos y otros olores Alfileres agujas prendedores Quitarles ha las camisas muy del-gadas y los manteos vasquintildeas briales saboyanas nazarenas y rebo-cinos y en lugar de aquellos sus cabellos encrespados y enrifados les daraacute pelambre y calvez y en lugar de aquellos apretadores y joyeles

144 JUAN FRANCISCO MAURA

que les cuelgan de la frente les daraacute dolor de cabeza y por cinta de ca-deras de oro muy esmaltadas y labradas les daraacute sogas de muy aacutespero esparto con que se cintildean y aprieten y por aquellos sus muy curiosos y suntuosos ataviacuteos de su cuerpo les daraacute siacutelici y desta manera haraacute Dios que lloren su lascivia y desorden y que de su lujuria y deshonestidad hagan grave penitencia Entonces no habraacute quien las quiera por su he-diondez y miseria en tanto que siete mujeres se encomendaran a un varoacuten y eacutel de todas huiraacute menospreciaacutendolas y aborrecieacutendolas como de gran mal (Villaloacuten 860-61 vol 2 canto 20)

Excelente lista de aderezos femeninos de los cuales pocos son reconocibles en nues-tros diacuteas Gran frustracioacuten debiacutea de tener con las mujeres el autor de estas liacuteneas sien-do al parecer muy poco correspondido por estas uacuteltimas La misoginia que aparece en estas liacuteneas refleja cierta ingenuidad La mujer que se nos presenta debioacute de ser bastante atractiva y sofisticada portando una gran variedad de adornos muchos de ellos de origen oriental y de perfumes que poco tendriacutean que envidiar a los de la mujer moderna En Descripcioacuten breve de toda la tierra del Peruacute Tucumaacuten Riacuteo de la Plata y Chile obra escrita en Chile entre 1603 y 1609 por el padre Reginaldo de Lizarraga nacido en Medelliacuten (Espantildea) en 1545 y trasladado a Ameacuterica a los quince antildeos vemos una asombrosa semejanza con la cita anterior En esta obra del padre dominico dedicada al entonces presidente del Consejo de Indias conde de Lemos observamos coacutemo su descripcioacuten de la vestimenta de las mujeres de Lima ofrece notables semejanzas con la escrita unos antildeos antes en Espantildea En su capiacutetulo 51 titulado laquoDe los vestidos de las mujeresraquo dice lo siguiente

Lo que en esta ciudad [Lima] se admira mucho y aun lo que se ha-biacutea de refrenar es los vestidos y trajes de las mujeres son en esto tan costosas que casi no se sabe como lo pueden sufrir sus maridos La soberbia de ellas es demasiada y no sabemos en lo que han de venir a parar plegue a Dios y no sea en lo que pararon aquellas de quien dice Nuestro Sentildeor Porque las hijas de Sioacuten se ensoberbecieron (esto es las ciudadanas) cuando saliacutean de sus casas llevaban las gargantas ex-tendidas los ojos altos a una y otra parte guintildeaacutendolos los pasos muy compuestos el Sentildeor las volveraacute calvas y les raeraacute los cabellos de sus cabezas les quitaraacute sus chapines y jerbillas bordadas las medias lunas rodetes las cadenas y collares de oro las ajorcas los tocados costosos los punzones de oro para partir las crenchas los zarcillos y los olores los anillos y piedras preciosas etc y por los olores seles daraacute muy pes-tilencial olor y por las cintas de oro sogas de esparto etc No creo yo hay en lo descubierto del mundo ciudad en su tanto ni cuatro veces mayor que a tanta soberbia en este particular como esta nuestra ciu-dad [Lima] llegue acueacuterdome que los antildeos pasados maacutes ha de treinta y ocho que llegando un religioso nuestro de Espantildea nacido y criado en Toledo a nuestro convento de esta ciudad cerca de la fiesta de Cor-pus Christi tratando de ella y de la suntuosidad majestad y riqueza que aquel diacutea en Toledo en calles y ventanas se mostraba le deciacuteamos que no nos espantase porque en nuestra ciudad veriacutea coacutemo no le ha-

145ESPANtildeOLAS DE ULTRAMAR EN LA HISTORIA Y EN LA LITERATURA

ciacutea mucha ventaja Toledo Llegoacute la fiesta vio la riqueza que se mostroacute en los vestidos de las mujeres adornos de ventanas altares y calles dijo que la riqueza de Toledo en este diacutea mostrada no haciacutea muchas ventajas a la de esta ciudad Pues es cierto que hay tanta diferencia de entonces ahora en lo que vamos tratando como de vestidos de aldea a vestidos de corte con justo tiacutetulo se podriacutea moderar por los virreyes esta soberbia pero no seacute por queacute no se modera y siacute seacute por queacute ni los maridos no tienen aacutenimo para moderarlo ni los gobernadores tampo-co (Lizarraga 38 lib 1 cap 51)

Seriacutea injusto y exagerado afirmar que los descubrimientos transoceaacutenicos se hicieron por la presioacuten que ejercieron las mujeres sobre sus amantes para que estos les trajesen laquomaacutes raacutepidamenteraquo todo ese laquosin finraquo de delicadezas exoacuteticas de todo tipo que existiacutean en el Oriente Lo que siacute es cierto es que las mujeres fueron grandes consumidoras de perfumes afeites sedas joyas y otros bienes suntuarios siendo muy conscientes de lo que hoy entendemos como laquomodaraquo Martiacuten Fernaacutendez de Navarrete en su indispensa-ble trabajo sobre los primeros viajes transoceaacutenicos Coleccioacuten de los viajes y descubrimien-tos menciona de paso la situacioacuten de algunas mujeres durante el siglo XV Es precisa-mente esta eacutepoca en la cual portugueses y castellanos entran en conflicto por el control de algunas posesiones en las costas africanas

y crecioacute el lujo a tal extremo que aun las mujeres de los menestrales y artesanos se confundiacutean en los vestidos con las de alto linaje y esta-do usando ropas de ricas telas de seda de oro de lana con forros de martas y pieles y con guarniciones de oro plata y aljoacutefar cuyo gasto por ser ruina de las familias se tratoacute de corregir aunque sin efecto en las Cortes de Palenzuela (M Fernaacutendez de Navarrete 75 21)

El mismo autor resalta la importancia que tuvo para el comercio de Castilla el contar con una buena armada que protegiese a los barcos de piratas y otros peligros Gracias a los inventarios que se han conservado del duque de Beacutejar y de don Alvaro de Zuacutentildeiga conocemos el lujo de estos sentildeores en perlas orientales piedras preciosas telas y demaacutes utensilios de gran valor134 Existe una Real Pragmaacutetica de Fernando el Catoacutelico a Diego Coloacuten en donde aparece nuevamente la conciencia que se teniacutea sobre la manera de ves-tir que deberiacutean llevar las damas castellanas

R PRAGMAacuteTICA SOBRE EL VESTIR Y GASTAR SEDA EN LAS IN-DIAS Valladolid 12 de noviembre de 1509 Don Fernando etc A vos Don Diego Coloacuten nuestro Almirante y Gobernador de las Indias del mar Oceacuteano y a otro cualquier mi Gobernador etc Sepades que yo he sido informado de los muchos gastos y costas que se han hecho y facen y se esperan hacer si yo no lo mando proveer y remediar en el vestir y gastar de las sedas y brocados y bordados en la Isla Espantildeola y en las otras islas y poblaciones de las dichas islas del mar Oceacuteano tra-yendo en ello mucho desorden y yo por el amor y voluntad que tengo

134 AGI Indiferente 418 Libro 2 fol 87v Publicada en DH Am Tom 6 paacutegina 191 DIA Tomo 31 pag 470 DIU Tomo 5 paacuteg 166 Seguacuten la RC a Diego Coloacuten fechada a 14 de noviembre de 1509 es la pragmaacute-tica que se guarda en Castilla sobre la manera de vestir (DIU Tomo 5 paacutegina 174)

146 JUAN FRANCISCO MAURA

a esas dichas Indias y a los pobladores dellas y porque deseo que ellas se aumenten y acrecienten por las haber ganado y descubierto por la gracia de Nuestro Sentildeor con nuestra industria trabajo y costa y los po-bladores dellas no hagan sobre lo suso dicho tan excesivos gastos sino pues que van a ellas con deseo y voluntad de se ayudar y aprovechar del oro que por gracia de Nuestro Sentildeor se descubre de cada diacutea se detengan en lo gastar en semejantes cosas para se aprovechar dellos en otras cosas que maacutes les convenga asiacute para sus personas como para sus haciendas y por evitar y excusar lo suso dicho mandeacute lo platicar con algunos de mi Consejo y por ellos visto se halloacute que porque nuestros suacutebditos y naturales que viven y estaacuten en dichas Indias no gasten sus haciendas en semejantes desoacuterdenes y que las conserven y guarden pa-ra sus menesteres y por el bien y el pro comuacuten de todos generalmente mando dar esta mi carta premaacutetica sancioacuten la cual quiero y mando que haya fuerza y vigor de ley bien ansiacute y a tan cumplidamente como si fuese fecha y promulgada en Cortes por lo cual ordeno y mando que en cuanto a mi merced y voluntad fuere ninguna ni algunas personas de cualquier ley estado condicioacuten que sean que estuvieren de morada o vivienda o en otra cualquier manera en la dicha Isla Espantildeola y en las otras islas desas dichas Indias y tierra firme no puedan traer y traigan ropa alguna de brocado ni de seda ni de chamelote de seda ni zarzahaacuten ni tercenel ni tafetaacuten ni vainas ni correas de espada ni en cinchas ni en sillas ni en alcorques ni en cosa alguna ni tampoco puedan traer ni trai-gan bordados de seda ni chapado de plata ni de oro de martillo ni fila-do ni tejido ni de otra cualquier manera pero que las personas que tu-vieren en las dichas Indias bienes asiacute muebles como raiacuteces que valgan hasta la cuantiacutea de mil castellanos que ellos y los hijos que tuvieren de hasta edad de catorce antildeos traigan jubones y caperuzas y bolsas y ribe-tes y pestantildeas de seda de cualquier color que quisieren con tanto que en una ropa no traigan maacutes de un ribete y que no haya en los dichos ribetes y pestantildeas maacutes anchura de cuanto un dedo pulgar y que no se traiga en los ruedos de las ropas y que puedan traer becas de tercenel y de tafetaacuten y de papahigos de camino aforrados en el mismo tercenel y tafetaacuten y ansiacute mismo permitimos que puedan traer de seda las cora-zas y guarnecer las faldas y gocetes y capacetes y baberas y quejotes y traer cojines de seda en la silla de la jineta y que las mujeres de las tales personas que tuviesen bienes en la dicha cuantiacutea de los dichos mil castellanos y sus hijas siendo doncellas puedan traer gonetes y corseacutes y fajas de dos varas de largo de seda y [borradas dos letras por mancha de tinta] mas y de lo de vestir y mudar cuando quisieren y por bien tuvieren quier sea moyil o faldilla o cota o haacutebito u otra cualquier ropa con tanto que juntamente no puedan vestir ni vistan maacutes de una ni les pongan trepas ni tiras de seda ni de brocado ni de oro tirado ni tejido ni relido ni en las ropas de pantildeo pongan cortapisas ni lisonjas ni trepas ni tiras ni otra guarnicioacuten alguna de seda ni de brocado salvo que puedan traer un ribete o pestantildea de seda de anchura de un dedo pulgar asiacute en

147ESPANtildeOLAS DE ULTRAMAR EN LA HISTORIA Y EN LA LITERATURA

las ropas de seda como en las de pantildeo en los ruedos de las faldas y para las costuras y no otra cosa alguna y que no traigan la dicha seda en las guarniciones de las mulas ni en angarillas ni en sillas ni en pantildeos ni en otra cosa alguna y que ansiacute mismo no puedan traer mantillas de seda ni enforradas en seda sopena que l que contrario hiciere pierda las ro-pas que ansiacute trujere vestidas por primera vez y sea repartido la mitad para el juez que lo juzgare y la otra mitad para el juez que lo acusare y por la segunda que pierda la ropa y se parta como dicho es y sean desterrados de la isla donde viviere para dos antildeos y por cuanto algu-nas personas de los que nuevamente destos reinos de Castillaa van a se avecindar y poblar y estar en las dichas Indias y son de honra acae-ce que no llevan tantos bienes que valgan la dicha cuantiacutea de los mil castellanos que mando que tengan los que hubieren de traer seda en la manera que dicha es que a eacutestos tales no se entienda y extienda lo suso dicho y que puedan traer la dicha seda seguacuten y en la manera que dicha es y no maacutes hasta tanto que haya un antildeo que estaacuten en las dichas Indias que corra y se cuente desde el diacutea que llegare fasta ser cumplido y que siacute cumplido no tuviere bienes que valgan la dicha cuantiacutea de los dichos mil castellanos que no puedan traer seda ninguna so la dicha pena de suso contenida la cual mando a vos las dichas nuestras justi-cias y a cada una de vos que esta mi carta y todo lo en ella contenido y cada cosa y parte dello guardeacuteis y cumplaacuteis y ejecuteacuteis por manera que se cumpla y ejecute lo en ella contenido so pena de perdimiento de los oficios y que seades inhaacutebiles para haber otros semejantes y que pagueis la estimacioacuten de la tal ropa que dejardes de ejecutar y para que lo susodicho sea notorio y ninguno dello pueda pretender ignorancia mando que esta mi carta sea pregonada puacuteblicamente por las plazas y mercados y otros lugares acostumbrados desas dichas islas por prego-nero y ante escribano puacuteblico(Konetzke Coleccioacuten 23)135

Tambieacuten se sabe de las joyas que Rodrigo Ponce de Leoacuten marqueacutes de Caacutediz debioacute dar a dontildea Beatriz Pacheco (M Fernaacutendez de Navarrete 75 22) Lo que siacute queda claro es que la navegacioacuten seraacute a partir de estos antildeos la forma maacutes raacutepida e importante para comerciar con aquellos paiacuteses de Oriente que antes soacutelo era posible alcanzar a traveacutes de rutas terrestres Existe un documento muy representativo de este periodo sobre la posesioacuten de joyas de gran valor por parte de miembros de una de las familias maacutes repre-sentativas residentes en Ameacuterica Los protagonistas son en este caso el almirante Diego Coloacuten y su mujer Mariacutea de Toledo Dice el documento que El jurado Antoacuten Bernal y Juana de Hoces su mujer vecinos de Sevilla en la collacioacuten de Santa Cruz reciben de Diego Coloacuten Almirante de las Indias laquoun joyel muy rico de oro de hechura de escudo que tiene en medio una piedra preciosa grande esmeralda e debaxo de la dicha piedra un rostro de aacutengel labrado en el mismo oro esmaltado e a cada lado del dicho rostro una piedra preciosa diamante pura y debaxo una piedra gruesa pendiente que pesa el dicho

135 AGI Indiferente 418 Libro 2 fol 87v Publicada en DH Am Tom 6 paacutegina 191 DIA Tomo 31 pag 470 DIU Tomo 5 paacuteg 166 Seguacuten la RC a Diego Coloacuten fechada a 14 de noviembre de 1509 es la pragmaacutetica que se guarda en Castilla sobre la manera de vestir (DIU Tomo 5 paacutegina 174)

148 JUAN FRANCISCO MAURA

joyel con todo lo susodicho medio marcoraquo Los citados Antoacuten Bernal y su esposa se dan por pagados de todo lo que se les adeudaba y se obligan a su vez a devolver el joyel al Almirante si este les paga en dinero El 23 de agosto de 1530 siete antildeos despueacutes la virreina canceloacute la anterior obligacioacuten y recuperoacute el mencionado joyel (AHPS Libro del antildeo 1523 Oficio I Escribaniacutea Alonso de la Barrera Folio 1173 Fecha 3 de diciembre) En la misma casa del almirante otra mujer Briolanga Muntildeiz su tiacutea materna se obliga a pagar al mercader genoveacutes Batista Catantildeo 22 ducados de oro laquopor cierto raso que le comproacute y habiacutea de ser pagado en el puerto de Santo Domingoraquo (AHPS Libro del antildeo 1509 Oficio V Libro uacutenico Escribaniacutea Francisco Esquibel Folio Primer tercio del lega-jo Fecha 9 de marzo) Dontildea Briolanga recibiacutea cada antildeo para su mantenimiento 100000 maravediacutes del almirante mayor de las Indias por medio de Gaspar Gurricio monje del monasterio de Santa Mariacutea de las Cuevas (AHPS Libro 1510 Oficio XV Libro II Es-cribaniacutea Bernal Gonzaacutelez Vallesillo Folio primer tercio del legajo Fecha 4 de julio) Resulta interesante hacer notar la temprana presencia (1516) de un ingleacutes en Santo Domingo involucrado igualmente en la compra de telas Se trata de laquoNicolas Arnoteraquo residente en Santo Domingo que debe pagar a Mariacutea Caldera mujer del comendador Diego Barbosa el valor de una cama de sargas de colores de Flandes (AHPS Libro del antildeo 1516 Oficio XV Libro II Escribaniacutea Bernal Gonzaacutelez Vallesillo Folio Primer tercio del legajo Fecha 28 de agosto) Sin embargo anteriormente a esa fecha (1514) encontramos a un veneciano casado con una inglesa mucho maacutes ceacutelebre en sus viajes trasoceaacutenicos laquoSevastiaacuten Cavotoraquo capitaacuten del rey don Fernando y vecino de Sevilla136

De forma paralela se observa tambieacuten un cierto desenvolvimiento de la mujer en su medio lo que equivaliacutea a intercambios de informacioacuten a todos los niveles incluyendo por lo tanto el cultural No era extrantildeo que tuviesen libros de comedias a mano y que llegasen incluso a escribir comedias ellas mismas Efectivamente la sospecha de que las damas llegasen a escribir comedias estaba bien fundada Veacuteanse algunos ejemplos Ana Caro Malleacuten de Soto una de las maacutes famosas dramaturgas de la Sevilla del siglo XVII autora de El conde de Partinupleacutes utiliza el tema del amor en sus maacutes diversas variantes fiacutesicas y espirituales como el eje de casi todas sus obras (Perry 57) Este hecho por otra parte indica el favor del puacuteblico ante un tema tan popular Veacutease otro ejemplo

The drama of this period did not present love and marriage as a simple partnership however and many dramatists contrasted laquoprofaneraquo with laquohonestraquo love Feliciana Enriacutequez de Guzmaacuten who wrote Tragicome-dia Los jardines y campos sabeos in Seville in the early seventeenth cen-tury presented the hero Clarisel as the victim of laquopervertedraquo and fickle Belidiana in part 1 so blinded by her beauty that he feels himself laquoin shackles and in chainsraquo (Perry 57)

Pero las damas espantildeolas de esta eacutepoca no soacutelo escribiacutean comedias algunas tambieacuten se aventuraron a escribir tratados cientiacuteficos Uno de estos casos fue el de Oliva Sabu-co de Nantes Barrera que a finales del siglo xvi escribioacute un tratado meacutedico sobre la naturaleza humana advirtiendo que la lujuria podiacutea perjudicar al cuerpo Se basaba en

136 Sebastiaacuten Caboto o laquoSevastiaacuten Cavotoraquo estaba casado con Juana Cavoto vecina que fue de la ciudad de Londres en la parroquia de San Gil (AHPS Libro del antildeo 1514 Oficio I Libro II Escribaniacutea Mateo de la Cuadra Folio 253 Fecha 14 de Septiembre) citado en CFAAPS Vol 3 doc 128 p 37

149ESPANtildeOLAS DE ULTRAMAR EN LA HISTORIA Y EN LA LITERATURA

la presuncioacuten de que la lujuria provocaba que el cerebro emitiese un liacutequido que iba al estoacutemago enfriaacutendolo y debilitaacutendolo interrumpiendo de esta manera las funciones vitales (Perry 58)

Se sabe que en la eacutepoca de Isabel la Catoacutelica habiacutea muchas mujeres estudiantes y que la propia reina las impulsaba a estos menesteres iniciativa que obtuvo sus frutos en las deacutecadas siguientes Ademaacutes de las conocidas novelistas Mariacutea de Zayas y Sotomayor y dontildea Mariana de Carvajal existioacute toda una serie de escritoras de todos los geacuteneros lite-rarios que florecieron a ambos lados del Atlaacutentico y que no solamente llaman la aten-cioacuten por su nuacutemero sino por la calidad de sus obras Algunas de ellas como dontildea Luisa de Padilla condesa de Aranda calificada por Serrano y Sanz como laquola maacutes notable de cuantas florecieron en Espantildea en el siglo XVIIraquo personificaraacuten a la perfeccioacuten a este tipo de mujeres Tambieacuten deberiacuteamos saber cuaacutentas seriacutean las mujeres que escribieron con pseudoacutenimos masculinos

La informacioacuten sobre las diferentes facetas de la vida femenil con que contamos no es abundante A pesar de todo podemos hacernos una idea maacutes clara de la verdadera situacioacuten de la mujer a traveacutes de una nueva interpretacioacuten de los textos tanto de los medievales como de las croacutenicas de los primeros antildeos del descubrimiento y conquista Algunos estudios relativamente recientes surgidos por el intereacutes general que suscita todo lo concerniente a la mujer han ayudado a considerar nuevas perspectivas La eru-dicioacuten moderna estaacute poniendo en tela de jucio los estereotipos tradicionales en cuanto a la pasividad y relevancia femeninas asiacute como al tradicional misogenismo que se atri-buye a la eacutepoca medieval Cada vez estaacute maacutes claro que la existencia de estas mujeres variaba considerablemente seguacuten la eacutepoca posicioacuten social o situacioacuten geograacutefica por lo que hacer valoraciones categoacutericas sobre laquola situacioacuten de la mujerraquo puede llevar a graves equivocaciones (Dillard 9) Es fundamental para comprender a la mujer espa-ntildeola que pasoacute al Nuevo Mundo tener en cuenta las enormes diferencias de todo tipo que existieron en la sociedad castellana y novomundista Un pintoresco ejemplo es el de laquolas tapadasraquo una usanza de origen aacuterabe que se pondriacutea de moda en Castilla poco despueacutes de la toma de Granada por los Reyes Catoacutelicos y que despueacutes pasariacutea al Peruacute Esta tradicioacuten ha perdurado en algunos pueblos de Espantildea hasta relativamente poco tiempo pueblos como Mojaacutecar (Almeriacutea) y Vejer de la Frontera (Caacutediz) son ejemplo de esta costumbre tambieacuten conocida como el de las laquocobijaacutesraquo

Tras la caiacuteda del reino musulmaacuten de Granada en 1492 la corona espa-ntildeola prohibioacute a las mujeres aacuterabes de Andaluciacutea vestir los velos islaacutemi-cos que cubriacutean sus rostros y ocultaban su identidad No era faacutecil des-arraigar esta costumbre tan ancestral y secular y el emperador Carlos asiacute como su hijo el rey Felipe II tuvieron que repetir la prohibicioacuten Cuando finalmente las moras fueron obligadas a abandonar sus velos y a adoptar el chal castellano comenzaron a utilizar la nueva prenda para cubrir sus rostros dejando al descubierto soacutelo uno de los ojos Esta nueva moda en el uso del chal tradicional nos asegura leoacuten Pi-nelo era extremadamente graciosa sensual y atractiva a causa de la belleza exoacutetica de los ojos de las moras Las mujeres cristianas de Granada Coacuterdoba y Sevilla imitaron pronto la nueva moda de llevar el chal y asiacute nacioacute la laquotapadaraquo hispana Desde Sevilla la nueva moda

150 JUAN FRANCISCO MAURA

fue a las colonias de ultramar y tomoacute raices especialmente en el Peruacute (Martiacuten 317-18)

En un reciente estudio sobre la educacioacuten de la mujer en la Ameacuterica virreinal apare-cen algunos ejemplos significativos de mujeres espantildeolas que consagraron gran parte de sus vidas a la tarea docente Dentro del proceso educativo de las espantildeolas que fueron a las Indias destaca el papel de dontildea Catalina de Bustamante Joseacute de Jesuacutes Vega y Ma-riacutea Luisa Caacuterdenas de Vega dicen en su obra Ameacuterica Virreinal La Educacioacuten de la mujer que esta mujer pocos antildeos despueacutes del descubrimiento del Nuevo Mundo se dedicoacute a trabajar en favor de los indios aunque por desgracia su nombre y sus hechos en la labor docente hayan sido ignorados por los historiadores modernos (Vega 12-13)

Son varias las veces que se nombra a Catalina de Bustamante en el citado estudio y varias las fuentes antiguas en que se recoge la presencia de tan distinguida laquomatrona muy honrada y de buen ejemploraquo de la que ya hablaba Zumaacuterraga y sobre la que se hizo un informe enviado a Carlos V describiendo sus actividades en la Nueva Espantildea firmado por cuatro de los misioneros maacutes conocidos de Meacutexico

El informe dice que los franciscanos de Texcoco acababan de cons-truir un nuevo monasterio y cedido el antiguo A una honrada y honesta y muy virtuosa matrona que se dice Catalina de Bustamante para que ende instruyese a las hijas de los sentildeores de la comarcala cual con el favor de Dios y limosnas que don Hernando [Corteacutes] les haciacutea para su sustentacioacuten [teniacutea en esa casa-hogar] hasta trescientas mujeres antes maacutes que menos (Vega 14)

Estas laquocasas-hogarraquo no estaban regentadas necesariamente por monjas sino por lo que llamaban laquobeatasraquo mujeres que sin estar estar sujetas a la autoridad eclesiaacutestica se dedicaban a un laquolucro honestoraquo Llamadas tambieacuten laquobeateriosraquo eran diferentes a los conventos de monjas y constituiacutean las primeras escuelas de la mujer en la Nueva Espa-ntildea (Vega 20-21) Fue gracias al ejemplo de mujeres como Catalina de Bustamante que dedicaron sus vidas a la educacioacuten de los indiacutegenas que existiesen otras continuando su ejemplo Motoliniacutea dice claramente que laquode ese primer encerramiento (el de Texcoco regentado por Catalina) salieron otras honestas y muy virtuosas duentildeas que ensentildeaban a las maacutes menudasraquo (Vega 23)

Pero dontildea Catalina de Bustamante pese a ser una singular mujer y la iniciadora de la educacioacuten de la mujer en Meacutexico no fue un caso aislado corresponde maacutes bien a un patroacuten al que se ajustaron muchas de las pioneras de la Nueva Espantildea que sembraron instituciones de educacioacuten de la mujer En 1530 unos antildeos maacutes tarde aparecioacute una de las grandes protectoras de la instruccioacuten femenina en Ameacuterica La emperatriz Isabel de Portugal (Vega 24)

Desde comienzos de la conquista fueron varios los centros docentes regentados por mujeres en los que la ensentildeanza no estaba impartida por monjas Una de las institucio-nes maacutes sobresalientes del sistema educativo fue el Colegio de Nintildeas que se establecioacute en la ciudad de Meacutexico a principios del siglo XVI con maestras que no eran monjas Estas seglares conocidas comunmente como laquomigasraquo eran las descendientes de las antiguas beatas Su ubicacioacuten permanente fue determinada en 1548 lugar que serviriacutea de escue-la ininterrumpidamente hasta 1862 cuando el edificio fue convertido en bodega (Vega 60) No se debe perder de vista que no soacutelo por el hecho de llevar una vida secular se

151ESPANtildeOLAS DE ULTRAMAR EN LA HISTORIA Y EN LA LITERATURA

gozaba de maacutes privilegios Era maacutes bien al contrario En las carreteras las mujeres segla-res no inspiraban el mismo respeto que las monjas que ademaacutes teniacutean contacto cons-tante con personas de los dos sexos no pertenecientes a la Iglesia (Arenal 297) Ademaacutes dentro de las murallas del convento desapareciacutean muchas de las barreras sociales que limitaban a la mujer de esta eacutepoca

La presencia femenina y la monarquiacutea

Pues iquestcoacutemo sabes tuacute preguntoacute don Quijote que los grandes llevan detraacutes de siacute a sus caballerizos Yo seacute lo direacute respondioacute Sancho Los antildeos pasados es-tuve un mes en la corte y alliacute vi que paseaacutendose un se-ntildeor muy pequentildeo que deciacutean que era muy grande un hombre le seguiacutea a caballo a todas las vueltas que daba que no pareciacutea que era su rabo Pregunteacute que coacutemo aquel hombre no se juntaba con el otro sino que siempre anda-ba tras deacutel Respondieacuterome que era su caballerizo y que era uso de grandes llevar tras siacute a los tales Desde enton-ces lo seacute tan bien que nunca se me ha olvidado (Cervan-tes Don Quijote)

Los monarcas espantildeoles fueron conscientes de que sin la presencia femenina difiacute-cilmente se podriacutea solidificar una conquista a todos los niveles La mayor parte de los virreyes y altos cargos trajeron a sus mujeres con ellos y en las ciudades principales de Hispano-Ameacuterica como la ciudad de Meacutexico Guatemala Lima o Potosiacute habiacutea mujeres que disfrutaban de una esmerada educacioacuten (gramaacutetica latiacuten poesiacutea historia muacutesica) Esto dariacutea origen a una elegante y hasta cierto punto sofisticada sociedad en la que las mujeres tomaron parte en asuntos maacutes importantes que los que sus homoacutelogas toma-ran en las colonias portuguesas laquoThere were brilliant vice-regal courts at Mexico City and Lima far exceeding anything that could be found in Portuguese or English America during the seventeenth centuryraquo (Boxer 39) Las estadiacutesticas con las que contamos hoy no soacutelo demuestran que las mujeres llegaron al Nuevo Mundo en respetables porcen-tajes sino que ademaacutes tuvieron una participacioacuten activa llegando a intervenir en algu-nos casos en las liacuteneas de vanguardia Resulta difiacutecil aproximarse al estado de aacutenimo de aquellas mujeres que vivieron en eacutepocas tan lejanas Para ello es necesario indagar en los documentos de la eacutepoca para lograr rescatar del pasado todos esos tesoros de la historia muchas veces tergiversados y manipulados con el fin de que sirvan a propoacutesi-tos actuales Es en los viejos manuscritos donde queda testimoniada su presencia tan rica en dolores tragedias y por queacute no en amores Fue la llegada de estas mujeres una brisa de esperanza y de ilusioacuten para aquellos que ya estaban en las tierras de ultramar y

152 JUAN FRANCISCO MAURA

veiacutean venir de su propia tierra aquello que maacutes antildeoraban amantes madres hermanas Un haacutelito de vida y poesiacutea que suavizaba las costumbres de estos rudos y romaacutenticos pioneros laquoporque para ser hombres de tales empresas algo de romaacutentico debioacute de existir en ellos y que es tan propio del espantildeol y abandonariacutean en brazos tan gentiles sus bruscos modales que habiacutean adquirido en aacutespero contacto en selvas y montantildeasraquo (Villafantildee 125)

Hoy sabemos que en la normativa oficial de la Espantildea del siglo XVI y XVII se favoreciacutea el paso de mujeres al Nuevo Mundo Afirmar lo contrario no solamente es falso sino que implica un desconocimiento total de los primeros dos siglos de la colonizacioacuten espantildeola La presencia de estas mujeres espantildeolas fue efectiva laquolas disposiciones al respecto demuestran claramente que se teniacutea especial intereacutes en su arraigo y que se tra-taba de defender su posicioacuten de mujeres casadas con conquistadores y colonizadoresraquo (Villafantildee 126) Los monarcas comprendiacutean que era praacutecticamente imposible que los hombres viviesen sin mujeres y que de ser asiacute era de esperar que se cometiesen abusos con las indias lo que incidiriacutea en la moral social y en el buen gobierno de la colonia Ademaacutes sin un asentamiento definitivo con hogares y familias difiacutecilmente se podriacutea llevar a cabo una presencia permanente en las nuevas colonias (Orsquo Sullivan-Beare 45)

Empezando por los Reyes Catoacutelicos la preocupacioacuten de que en las colonias se esta-bleciesen nuacutecleos que tuviesen como base la familia cristiana fue clara Las capitulacio-nes que a este efecto se hicieron entre los conquistadores y la Corona fueron nume-rosas La efectuada entre Rodrigo de Baacutestidas y Carlos V puede ser un buen ejemplo Fechada en Valladolid el 6 de noviembre de 1524 muestra el propoacutesito de Baacutestidas de establecer una colonia permanente en la desembocadura del riacuteo Magdalena en el terri-torio que hoy vendriacutea a corresponder a Colombia El documento firmado por el Empe-rador comienza asiacute

El Rey Por cuanto por parte de vos Rodrigo de Baacutestidas vecino de la ciudad de Santo Domingo de la Isla Espantildeola Me fueacute fecha relacioacuten que por servicio de la Catholica Reyna Mi Sentildeora e Nuestro os ofre-ceacuteis de poblar e poblariades la provincia e puerto de Santa Marta que en Castilla de Oro llamada la Tierra Firme e que la poblariades dentro de dos antildeos siguientes haciendo en ella un pueblo en que no menos haya en eacutel al presente cincuenta vezinos que los quince de ellos sean casados y tengan consigo a sus mujeres y que lo teniades fecho dentro de dos antildeos y de hoy en adelante lo maacutes que fuese posible asiacute de cris-tianos espantildeoles como de indios (Restrepo 1 30)

De igual manera el priacutencipe Felipe (futuro Felipe II) en las capitulaciones establecidas en 1547 con Juan de Sanabria para que eacuteste fuese como gobernador y capitaacuten general de la dicha provincia escribe lo siguiente laquoPrimeramente que seais obligado e os obligeis a llevar destos Reynos de Castilla a la dicha provincia del Rio de la Plata cien casados con sus mujeres e hijos para poblar la dicha provincia y con ellos llevareis a vuestra muger e hijos (CDI de Ameacuterica y Oceaniacutea 23 119)

En numerosas ocasiones se pone de manifiesto el apoyo de la monarquiacutea a la emigra-cioacuten femenina tantas que difiacutecilmente se podriacutean enumerar todos los casos Lo cierto es que la legislatura vigente favoreciacutea la emigracioacuten y traslado de mujeres con toda una se-

153ESPANtildeOLAS DE ULTRAMAR EN LA HISTORIA Y EN LA LITERATURA

rie de alicientes137 sobre todo si eacutestas estaban casadas pasaje para llevar a las familias franquicia de derecho para los artiacuteculos que portasen consigo favoritismo en cargos destinos y contrataciones a aquellos que pasasen con sus mujeres incluyendo ademaacutes de los castellanos y leoneses a suacutebditos de otras partes de la corona incluso genoveses y portugueses si estos veniacutean acompantildeados de sus consortes (Fernaacutendez Duro 15-16)

Incluso se llegoacute a imponer penas a aquellos hombres casados que no llevasen a sus mujeres con ellos a Indias en el teacutermino de un antildeo El mismo emperador en una ceacutedula otorgada al virrey de la Nueva Espantildea le recomendaba que laquoprocurase persuadir a ca-sarse a los solteros que estuviesen en edad y situacioacuten de hacerloraquo prometieacutendoles que al efectuar el matrimonio seriacutean preferidos en el reparto de indios En la isla de San Juan de Puerto Rico los cargos oficiales y oficios puacuteblicos debiacutean de ser desempentildeados por los casados en primer lugar En Meacutexico ocurrioacute lo mismo con los cargos de corregido-res (Konetzke laquoemigracioacutenraquo 140-41) Felipe II al igual que sus antecesores y sucesores reiteraraacute y justificaraacute los beneficios de los que seraacuten acreedores aquellos que tengan allaacute a sus mujeres laquoque los que han servido en los descubrimientos de las dichas Indias y tambieacuten los que ayudan a la poblacioacuten dellas que tienen allaacute sus mugeres sean preferi-dos en los aprouechamientos qualesquierraquo mandando que despueacutes de los conquistado-res se tuviera en cuenta para la laquoprovisioacuten de los corregimientosraquo a los colonos casados siempre que estuvieran capacitados para dichos cargos (Konetzke laquoemigracioacutenraquo 141)

Las disposiciones en favor del matrimonio son claras ya sea por medio de un favo-ritismo manifiesto como en los casos antes citados o mediante medidas de cohercioacuten para que esta poliacutetica se llevase a cabo Don Sebastiaacuten Ramiacuterez de Fuenleal obispo de Santo Domingo y presidente de la Audiencia de Meacutexico propuso que a aquellos enco-menderos que no estuviesen casados y que no hubiesen tomado parte en la conquista se les quitase los indios concedidos con la obligacioacuten de devolveacuterselos si en el plazo de un antildeo habiacutean contraiacutedo matrimonio (Konetzke laquoemigracioacutenraquo 142-43) Por supuesto hubo excepciones a estas reglas En algunos casos ni la mujer teniacutea especial intereacutes en vivir junto con su marido en las Ameacutericas ni el marido queriacutea ir a buscar a su mujer pasado el plazo de un antildeo En el presente documento y de forma excepcional las auto-ridades reales protegen a los conyuges para que puedan seguir viviendo separados en continentes diferentes

Nuestras justicias de la ysla de Cubagua e otras qualesquier de las nuestras Yndias yslas e tierra firme del mar oceacuteano e a cada uno e qualquier de vos a quieacuten esta mi ceacutedula fuese mostrada por parte de Alonso de Tapia nuestro veedor de la provincia de Paria me ha sido hecha relacioacuten que ha mucho tiempo que reside en esas partes donde nos ha servido en lo que se ha ofrecido e que agora vos otros le apre-miaacuteis a que venga o embiacutee a estos Reinos por su muger lo cual no puede al presente hazer a causa de no ter posibilidad para ello a mi me ha suplicado vos mandase que no le compeliacuteesedes ny apremiaacutesedes a que viniese o enviase por la dicha su muger y dieacutesedes por libres los fiadores que tenyades para que dentro de un antildeo embiariacutea o verniacutea por

137 Reales Ceacutedulas de los antildeos 1502 y 1503 Academia de la Historia Coleccioacuten Muntildeoz tomo 75 fols 209 y 220 citado por Fernaacutendez Duro 15

154 JUAN FRANCISCO MAURA

ella o como la mi merced fuese lo cual visto por los de nuestro consejo juntamente con una peticioacuten presentada por dontildea Mariacutea Gudiel muger del dicho Alonso de Tapia por la cual nos suplica lo mismo que acor-dado que debiacutea mandar esta mi ceacutedula para vos por la qual vos mando que no compelaacuteis ni apremieacuteis al dicho Alonso de Tapia a que venga ni enviacutee a estos reinos por la dicha su muger si no fuere a que la pro-vea de lo que fuere necesario para su mantenimiento y deys por libres quales quier fianzas que sobre ello haya dado e no fagades ende al por alguna manera Firmado en la villa de Valladolid a VII diacuteas del mes de febrero de mil e quinientos e treinta y siete antildeos yo el licenciado Con-de de Samano y sentildealada del cardenal Beltraacuten y Carbajal [Aparte en letra pequentildea] Este diacutea se despachoacute una provisioacuten por la cuaacutel su Mag hizo merced a Alonso de Tapia de la veedoriacutea de la provincia de Paria por muerte de Garciacutea de Aguilar con las clausulas ordinarias y con el mismo salario que teniacutea Aguilar Firmado del emperador y de Beltraacuten y Bernal y Velaacutezquez El Rey (Registro de disposiciones Riacuteo Marantildeoacuten AGI Indiferente General Legajo 416 libro 2 Fols 94v y 95r)

El punto maacutes interesante a destacar de todas estas disposiciones oficiales en cuanto a la emigracioacuten femenina al Nuevo Mundo no es otro que la libertad que se da a la mujer de decidir si quiere o no casada o sin casar trasladarse al nuevo continente no como una imposicioacuten sino como un precepto laquoel espiacuteritu de las disposiciones en el sentido de asegurar la vida marital de los casados significa que la mujer que su marido invita a pa-sar a las Indias puede negarseraquo (Villafantildee 127) Habriacutea que ver las opciones laquorealesraquo ade-maacutes de las legales y econoacutemicas que le quedaban a la mujer si tomaba esta decisioacuten

El saber la libertad de eleccioacuten que estas mujeres teniacutean de antemano antes de aden-trarse en las interminables penalidades y aventuras que los viajes de la navegacioacuten tran-soceaacutenica suponiacutean hace que sus hechos y esfuerzos cobren auacuten maacutes relieve En nume-rosas ocasiones estas mujeres cruzaron el oceacuteano una y maacutes veces sin otro motivo que el de defender los derechos e intereses de los suyos Lo que resulta maacutes valioso de todo esto es que lo hicieran por propia iniciativa arriesgando sus vidas para que se hiciese justicia y para que no les faltase lo necesario a aquellos que estaban en la otra orilla Las autoridades vigentes conocedoras de los vaciacuteos legales existentes en las nuevas colo-nias se apresuraron a poner en vigor aquellas normas que redundaran en el beneficio de los menos favorecidos por las circunstancias La institucioacuten del matrimonio cuya trans-cendencia es fundamental en la vida juriacutedica y social de la mujer tuvo que ser legislada en Ameacuterica con una serie de nuevas disposiciones agregados modificaciones y aclara-ciones Asiacute pues la legislacioacuten de base espantildeola tuvo que sufrir en tierras americanas esta serie de cambios por motivos poliacuteticos y sociales (Villafantildee 126)

Para hacer un sumario de lo dispuesto hasta el siglo XVI en cuanto a la legislacioacuten de las mujeres que teniacutean familia o intereses en Indias merece la pena mencionar que existieron una serie de disposiciones que protegiacutean a las mujeres para que eacutestas no se viesen abandonadas por sus maridos En un epiacutegrafe de la Recopilacioacuten de 1680 (libro VII tiacutetulo 3) se deja ver claramente la preocupacioacuten de las autoridades en este asunto laquoDe los casados en Espantildea e Indias que estaacuten ausentes de sus mujeres y esposasraquo (Vi-llafantildee 126-27)

155ESPANtildeOLAS DE ULTRAMAR EN LA HISTORIA Y EN LA LITERATURA

La lista de disposiciones se hace interminable En los reinados de Fernando el Catoacute-lico Carlos V Felipe II Felipe III o incluso Carlos II la insistencia es constante La ra-zoacuten de esta insistencia seriacutea bastante obvia dado que con un oceacuteano por medio seriacutean muchos los que se aprovechasen de llevar una doble vida marital sin el estricto control y vigilancia de sus mujeres que se encontraban en la peniacutensula La ley XXVII libro IX tiacutetulo XXVI determina laquoDeclaramos por personas prohibidas para embarcarse y pasar a las Indias todos los casados y desposados en estos reinos lsquosino llevaren con ellos sus mujeresrsquo aunque sean virreyes oidores gobernadores o nos fuesen a servir en cual-quier cargo y oficios de Guerra Justicia y Hacienda porque es nuestra voluntad que todos los susodichos lleven a sus mujeresraquo (Villafantildee 127) laquoLos eclesiaacutesticos eran los en-cargados de dar cuenta a los tribunales competentes de aquellos que estando casados permaneciacutean en Indias sin sus mujeres Son reiteradas las disposiciones de Fernando el Catoacutelico en este sentidoraquo138 En 1514 el rey don Fernando ordena en una provisioacuten para la isla Espantildeola laquodoy licencia eacute facultad aacute cualquier persona naturales de estos Reynos para libremente se puedan casar con mujeres naturales de esa dicha ysla sin tener que incurrir por ello en pena algunaraquo (Villafantildee 129)

No se debe olvidar tampoco a aquellas mujeres que decidieron pasar a las laquonuevas tierrasraquo solteras Estas mujeres tambieacuten tuvieron un papel importante en el desarrollo de las nuevas colonias Los organismos espantildeoles del momento como los mandatarios indianos y todos los cronistas no dejaron pasar desapercibida la importancia social de estas mujeres en la poliacutetica de poblamiento laquo[E]s cierto que los pueblos de Indias nuevamente poblados no se tienen por fijos o estables ni permanentes hasta tanto que mujeres espantildeolas entren en ellos y los encomenderos y conquistadores se casen por muchas causas y respetos buenos y saludables que para ello hayraquo (Villafantildee 126-27)

Si la intencioacuten era la de una presencia permanente en las tierras americanas la mujer soltera que pasase a ellas siempre seriacutea un motivo maacutes para el colono o conquistador de continuar en el mismo suelo Se podriacutea empezar una familia si asiacute se quisiese sin tener que pensar en volver a la metroacutepoli ya fuese a disfrutar de los bienes adquiridos o a laquobuscarraquo una esposa El problema aparecioacute cuando se produjo un exceso de mujeres solteras lo que de alguna manera alteroacute la estructura social existente ya que no habiacutea muchas opciones para ellas aparte del matrimonio o el convento

En consideracioacuten a que la experiencia habiacutea demostrado que un exce-sivo nuacutemero de mujeres ejerciacutea perniciosa influencia sobre la moral y las costumbres se suplicaba al rey no otorgase a aquellas tantas auto-rizaciones para emigrar al Peruacute La ciudad de la Plata fundada en 1538 emite en 1577 un informe en el que se expone la urgente necesidad de que se funde un convento de monjas pues en el territorio de las Au-diencias de Los Charcas existiacutea un gran nuacutemero de muchachas que no pudieacutendose casar se hallaban en gran peligro de perderse (Konetzke laquoemigracioacutenraquo 149)

138 Solorzano Pereira Juan de Libro Primero de la Recopilacioacuten de las Ceacutedulas Reales Cartas y Provisiones y Or-denanzas Reales Noticia preliminar de Ricardo Levenne Universidad de Buenos Aires Facultad de Derecho Y Ciencias Sociales Pub del Instituto de Historia del Derecho Argentino Coleccioacuten de Textos y Documentos para la Historia del Derecho Argentino t V Buenos Aires Imp de la Universidad de Buenos Aires 1945 (Li-bro I Ley 10 laquoQue los Espantildeoles puedan casar con Indias y al contrario a su voluntadraquo t2 p 138 citado en Villafantildee 129

156 JUAN FRANCISCO MAURA

Entristece ver coacutemo se manejan las cifras de estas mujeres como si de ganado o de bienes suntuarios se tratase Por otra parte existieron irregularidades como la de pobla-doras espantildeolas que vivieron amancebadas con hombres que ya estaban casados en la peniacutensula Normalmente esto ocurriacutea cuando la estancia del conquistador se prolonga-ba maacutes de lo debido en lugares donde habiacutea pocas espantildeolas Muchas veces nacieron hijos de estas uniones que hicieron auacuten maacutes difiacutecil la situacioacuten para las mujeres que esperaban en Espantildea a un marido que ya no teniacutea ningunas intenciones de volver En los juicios de residencia los documentos acostumbran a citar estos casos ya que era parte de su obligacioacuten castigar las irregularidades extramatrimoniales y salvaguardar las buenas costumbres familiares que con tanto intereacutes se deseaba mantener laquoUn ejemplo nos lo da la isla de Cuba donde en 1532 viven con hombres casados Olalla Hernaacuten-dez Santillana Aranda lsquola Cordobesarsquo Catalina de Leoacuten Catalina Saacutenchez Francisca Hernaacutendez Mayor de Azebedo Juana de Valeros y lsquouna mujer que estaba en casa de Ayalarsquoraquo (Borges 416)

Estos casos no fueron aislados y mucho menos en Cuba centro neuraacutelgico de todo el movimiento de ida y vuelta entre la metroacutepoli y el Nuevo Mundo Estas ocho acusa-ciones por lo tanto no tienen porqueacute considerarse extraordinarias y menos en el lugar maacutes cosmopolita de las Indias en esos momentos al que llegaban flotas a cada momen-to Al parecer existieron casos parecidos en el Riacuteo de la Plata Peruacute y Nueva Espantildea (Ratcliffe 347) El margen legal para que estas mujeres viviesen como quisiesen estuvo limitado por una moral que veiacutea uacutenicamente en el matrimonio o el convento una salida laquovaacutelidaraquo para que fueran aceptadas socialmente Los hombres en iguales circunstan-cias fueron juzgados por una laquomoralraquo mucho maacutes permisiva

La mujer y el cuerpo eclesiaacutestico

Pues iquestquieacuten diablos os traiacutedo aquiacute dijo don Quijote siendo hombre de la iglesia iquestQuieacuten sentildeor replicoacute el caiacutedo laquomi desventuraraquo Pues otra mayor os amenaza dijo don Quijote sino me satisfaceacuteis a todo cuanto primero os pregunteacute (Cervantes Don Quijote )

Otro factor a tener en cuenta en un anaacutelisis sobre la presencia de la mujer en el Nuevo Mundo es el que tiene que ver con la institucioacuten maacutes importante de las que llegaron desde Europa la iglesia catoacutelica Sin aacutenimo de criticar a tan compleja institucioacuten res-ponsable de gran parte de los aconteceres en el Nuevo Mundo vale la pena analizar algunas singularidades Muchos de sus miembros fueron grandes ejemplos de valor e inteligencia a la hora de tratar los maacutes variados y escabrosos asuntos con los que se encontraron los cristianos en la otra orilla durante este periacuteodo Se debe resaltar tam-

157ESPANtildeOLAS DE ULTRAMAR EN LA HISTORIA Y EN LA LITERATURA

bieacuten su caraacutecter medieval en la manera de hacer apostolado y de entender y tratar a los potenciales cristianos Si se tienen en cuenta los privilegios y prerrogativas que algunas de las altas jerarquiacuteas eclesiaacutesticas tuvieron no seriacutea superfluo estimar que un respeta-ble porcentaje de la poblacioacuten de origen laquodudosoraquo muy bien podiacutea venir de la misma iglesia Fueron muchas las viacutectimas y muchas las familias divididas por un padre laquoinvi-sibleraquo Gran parte de los hijos o laquosobrinosraquo de estos sacerdotes pasaron a ocupar cargos similares incluyendo los privilegios que estos cargos llevaban consigo como si se trata-se de cualquier otro oficio gremial transmitido generacionalmente regla tan comuacuten en la Europa medieval Todaviacutea a finales del siglo XIII en Espantildea los derechos de los hijos y nietos de los sacerdotes estaban protegidos por la ley sin que hubiesen podido ser erradicados por las reformas gregorianas (Ratcliffe 347)139

Las letras espantildeolas ya se haciacutean eco de estos lances amorosos entre representantes de la Iglesia y ciertas damas del lugar desde los tiempos del poeta riojano Gonzalo de Berceo En su obra maacutes conocida Los milagros de Nuestra Sentildeora Berceo describe con un realismo ingenuo y sencillo relatos de humor y de humanismo sobre aquellos hombres de carne y hueso que eran perdonados por la intercesioacuten de la Virgen Mariacutea Juan Ruiz por su lado haraacute de su Libro de buen amor la obra maacutes representativa en este sentido Seriacutea prolijo recordar la actuacioacuten de la Iglesia durante diversos periacuteodos de la Edad Media no soacutelo en Espantildea sino en toda Europa En la Espantildea musulmana del siglo XII concretamente en Sevilla el comportamiento de los representantes de la iglesia cristia-na (mozaacuterabe) en territorio islaacutemico es duramente criticado por el sevillano Ibn Abdun Este precioso documento muestra el estricto control y falta de confianza que existiacutea sobre la mujer prohibieacutendolas que entrasen en las laquoabominablesraquo iglesias cristianas

porque los cleacuterigos [cristianos] son libertinos fornicadores y sodomi-tas Asimismo debe prohibirse a las mujeres francas que entren en la iglesia maacutes que en diacuteas de funcioacuten o fiesta porque alliacute comen beben y fornican con los cleacuterigos y no hay uno de ellos que no tenga dos o maacutes de estas mujeres con que acostarse Han tomado esta costumbre por haber declarado iliacutecito lo liacutecito y viceversa Convendriacutea pues mandar a los cleacuterigos que se casasen como ocurre en Oriente y que si quie-ren lo hagan (Leacutevi-Provenccedilal 150)

Pese a existir una convivencia paciacutefica durante gran parte de la Edad Media entre los tres credos monoteiacutestas de Espantildea (cristianos musulmanes y judiacuteos) esto no suponiacutea que no existiese desprecio y desconfianza entre estos grupos religiosos Dice Abdun resaltando el peligro que suponiacutea que una mujer entrase en casa de un cleacuterigo cristiano de vida ceacutelibe

No debe tolerarse que haya mujer sea vieja o no en casa de un cleacuterigo mientras eacuteste rehuacutese casarse Obliacutegueseles ademaacutes a circuncidarse co-mo les obligoacute al-Mutadid pues si a lo que dicen siguen el ejemplo de Jesuacutes (iexclDios les bendiga y salve) Jesuacutes se circuncidoacute y precisamente ellos que han abandonado esta praacutectica tienen una fiesta que celebran solemnemente el diacutea de su circuncisioacuten (Leacutevi-Provenccedilal 150-151)

139 Valdriacutea la pena ver si han cambiado mucho las cosas desde hace quinientos antildeos a esta parte o si in-cluso la iglesia moderna ha retrocedido en tolerancia en cuanto a las relaciones sexuales de los representantes de la Iglesia

158 JUAN FRANCISCO MAURA

El historiador argentino Germaacuten Arciniegas recoge un pasaje ilustrativo de lo men-cionado anteriormente pero trasladado al ambiente de la colonia diciendo que incluso en poblaciones pequentildeas como Santa Fe con poco maacutes de un convento y una ermita la fragilidad de la carne enredaba a frailes soldados y virreyes por igual laquoEl buen So-liacutes que murioacute en olor de santidad con la cabeza reclinada sobre un par de ladrillos y en saya de franciscano cruzaba en las noches el solar de su palacio para ir a besar a la Marichuelaraquo (118-19)

Arciniegas recoge tambieacuten un suceso aparecido en el diario de Lima en 1667 que no tuvo que ser extraordinario durante los primeros antildeos de la colonia laquoEl fraile carmelita mdashGrande hereje y siendo sacerdote deciacutea misa gran perro lujurioso deshonesto que relatando sus maldades dijo que en cierta ciudad habiacutea conocido carnalmente a maacutes de trescientas y sesenta mujeres y en un convento de monjas habiacutea cometido muchos sacrilegios Este lo trujeron preso de Buenos Aires por Chileraquo (119)

Las controversias de la iglesia moderna sobre las relaciones que los eclesiaacutesticos de-ben tener con el sexo femenino parece que no han encontrado todaviacutea respuesta Sigue existiendo miedo y recelo a que la mujer comparta no soacutelo poder en la jerarquiacutea de la iglesiacutea sino en la vida privada de los miembros de la institucioacuten En la Nueva Espantildea el primer obispo de Meacutexico Juan de Zumaacuterraga viendo en la mujer un ser de tentacioacuten irresistible prohibioacute terminantemente la presencia de eacutestas en su casa Ni siquiera para su limpieza y aseo El franciscano Juan de Torquemada se refiere a este comportamien-to como una de las virtudes del popular obispo

Fue este benditiacutesimo prelado muy amigo de la virtud y de virtuosos y aceacuterrimo reprehendedor de vicios y viciosos y tan enemigo de la ociosidad que no permitiriacutea que alguno de su casa estuviese ocioso fue amiciacutesimo de la limpieza por lo cual jamaacutes consintioacute que mujer alguna entrase en su casa aunque fuese necesaria al servicio de ella ni nunca consintioacute que por alguna ocasioacuten subiese mujer a lo alto y aposentos de ella antes lo teniacutea todo cerrado como un monasterio porque sabiacutea (como quien tambieacuten sabiacutea) que la ocasioacuten suele derribar los maacutes fuertes y robustos corazones (450 lib 20 cap 31)

No fueron uacutenicamente miembros de la iglesia catoacutelica los que valoraron la lucha con-tra la tentacioacuten siguiendo al pie de la letra el crudeliacutesimo refraacuten laquoentre santa y santo pared de cal y cantoraquo Se tienen algunas noticias de la vida social de los primeros tiem-pos de la colonia En estos documentos se puede observar coacutemo no distaban mucho las oacuterdenes que se dictaban en la metroacutepoli y las que se llevaban a cabo en la Nueva Espantildea La vida social tanto de damas como de algunos miembros de la iglesia de las colonias era maacutes laquorelajadaraquo de lo que las normas permitiacutean Gracias a la informacioacuten ofrecida por Manuel Romero de Terreros disponemos de los nombres de las primeras virreinas

Las esposas de los primeros cinco Virreyes Don Antonio de Mendoza Don Luis de Velasco Don Gastoacuten de Peralta Don Martiacuten Enriacutequez de Almanza y Don Lorenzo Suaacuterez de Mendoza Conde de la Coruntildea fueron respectivamente Dontildea Caterina de Vargas Dontildea Ana de Cas-tilla y Mendoza hija de Don Diego de Castilla Sentildeor de Gor y Caba-

159ESPANtildeOLAS DE ULTRAMAR EN LA HISTORIA Y EN LA LITERATURA

llerizo de Carlos V Dontildea Leonor de Vieo Dontildea Mariacutea Manrique hija del Marqueacutes de Aguilar y Dontildea Catalina de la Cerda hija del segundo Duque de Medinaceli (Romero 2)

Existen noticias concretas de la seacuteptima virreina de la Nueva Espantildea (1586) dontildea Blanca de Velasco marquesa de Villamanrique En ellas destaca lo anteriormente men-cionado sobre la falta de tolerancia existente en aquellos tiempos difiacutecilmente com-prensible si no fuera por fragmentos esporaacutedicos conservados sobre la vida colonial en la Nueva Espantildea En la siguiente Relacioacuten hecha por autores anoacutenimos sobre la visita que hizo Fray Alonso Ponce Comisario General de la Orden Seraacutefica a las provincias de la Nueva Espantildea se mencionan las eneacutergicas medidas que con los miembros de su orden en su opinioacuten de moral laquomuy relajadaraquo tomoacute este religioso Tambieacuten aparecen mencionadas sus relaciones con la Virreina

Captoacutese ademaacutes la enemistad del gobernante y de la Virreina Dontildea Blanca de Velasco hija del cuarto Conde de Nieva sentildeora seguacuten pare-ce de conducta ligera y caraacutecter maacutes que dominante laquoPor este mismo tiempo (septiembre de 1586) fueron el Virey y la Vireyna a holgarse y recrearse en la cibdad de Xochimilco Posoacute con toda su casa dentro de nuestro convento en un dormitorio deacutel y detuacutevose alliacute siete u ocho diacuteas en que los indios les hicieron grandes fiestas aunque les costaron caras porque en una dellas murieron dos o tres dellos con un tiro que se disparoacute y reventoacute y al principal indio de aquella cibdad hirieron muy malraquo (Romero 3-4)

A pesar del riacutegido control eclesiaacutestico y civil que habiacutea en la Nueva Espantildea existieron tambieacuten pareacutentesis en los que incluso miembros de la iglesia y mujeres mdashhumanos al fin y al cabomdash pudieron disfrutar de algunos momentos de regocijo y alegriacutea Con-tinuando con la cita anterior el mismo autor se queja del laquoexcesoraquo de libertad en los frailes que se suponiacutea que teniacutean que profesar una extremada pobreza y no digamos castidad En primer lugar se describen pormenorizadamente la abundancia en el tipo y cantidad de comida de toda clase dulces y vino que se consumieron con largueza y generosidad durante aquellas fiestas Pero lo que maacutes indigna al autor (o autores) fue que llegasen a entrar mujeres en el convento

y aunque todo esto es malo delante de Dios y delante de los hom-bres lo que maacutes mal parecioacute y de que todo el mundo tuvo que mur-murar fueacute la demasiada libertad rotura y disolucioacuten que hubo en en-trar y estar muy de propoacutesito mujeres no soacutelo la Vireyna y las suyas sino otras muchas dentro del dicho convento y andar por las celdas como si fuese cosa profana y como si no hubiera breve apostoacutelico que soacute graves penas y censuras prohibe estas entradas y como si a los frai-les no los comprendiera el dicho breve por admitirlas y no estuviera asiacute declarado y mandado por nuestros estatutos generales de Toledo (Romero 4-5)

La preocupacioacuten por las laquotentaciones de la carneraquo fuera del matrimonio siempre es-tuvo en la mente de los religiosos espantildeoles asiacute como de otras nacionalidades y reli-

160 JUAN FRANCISCO MAURA

giones que intentaban vanamente erradicar algo tan intriacutenseco al ser humano como a cualquier otra especie animal Esta preocupacioacuten se acentuoacute mucho maacutes en el Nuevo Mundo donde muchas sociedades tribales no veiacutean a la mujer como parte integrante de su propiedad privada La razoacuten es obviamente socioloacutegica y ha existido desde el principio de los tiempos en las civilizaciones maacutes primitivas laquoNo desearaacutes a la mujer del proacutejimoraquo El quebrantar este precepto equivaldriacutea a desestabilizar desde su base a la sociedad judeo-cristiana fundamentada en la familia Las penas aplicadas en estas transgresiones seraacuten lo suficientemente severas como para marginar socialmente mdashen el mejor de los casosmdash a aquellos que las pongan en praacutectica Siendo la mujer la encar-gada por la naturaleza de trasmitir la descendencia de la especie su libertad sexual se veraacute limitada por el peligro de quedar embarazada cada vez que ignore tal elemental precepto140

Primeras escritoras del Nuevo Mundo

Contra cuerdos y contra locos estaacute obligado cualquier caballero andante a volver por la honra de las mujeres cualesquiera que sean Cuanto maacutes por las reinas de tan alta guisa y pro como fue la reina Madaacutesima a quien yo tengo particular aficioacuten por sus buenas partes porque fuera de haber sido fermosa ademaacutes fue muy prudente y muy sufrida en sus calamidades que las tuvo muchas (Cervantes Don Quijote)

Fueron varias las escritoras que durante los siglos XVI y XVII tuvieron una relacioacuten di-recta o indirecta con el Nuevo Mundo Muchas de ellas eligieron la vida monaacutestica mdashen algunos casos como refugio huyendo de sus maridosmdash uacutenica salida en una estructura social en donde no eran muchas las opciones especialmente en una eacutepoca donde el fac-tor religioso pesaba casi tanto como el econoacutemico pero sobre todo para dedicarse a una vida espiritual difiacutecilmente alcanzable en otras circunstancias Mariloacute Vigil apunta que las monjas que lo eran por su propia voluntad ademaacutes de tener inquietudes religiosas tambieacuten las teniacutean intelectuales como es el caso de la escritora miacutestica espantildeola Santa Teresa de Jesuacutes (1515-1582) que ademaacutes de tener una de las vidas maacutes interesantes que se conozcan supo sacar tiempo para escribir las maacutes bellas manifestaciones de la poesiacutea liacuterica y sobre todo de la prosa castellana (Vigil 237-38) Cada una de estas mujeres de-dicadas a la vida literaria y espiritual de su tiempo se merece muchiacutesimo maacutes espacio del que se les pueda ofrecer en estas pocas liacuteneas No obstante con estas pasajeras men-

140 Aunque afortunadamente las cosas han cambiado para la mujer no se debe dejar de mencionar la can-tidad de abusos sexuales de la que es viacutectima en la sociedad moderna

161ESPANtildeOLAS DE ULTRAMAR EN LA HISTORIA Y EN LA LITERATURA

ciones se espera al menos incluirlas y poder despertar el suficiente intereacutes para que sus vidas y sus obras no sigan sumergidas en las simas del olvido Para que estas mujeres de la iglesia pudiesen satisfacer su curiosidad cognoscitiva era necesario romper todas aquellas barreras que supusiesen un estorbo o una restriccioacuten a la hora de investigar consultar o hablar con cualquier persona religiosa de cualquier orden o secular ya fue-se obispo o cleacuterigo Las posiciones intelectuales entre las diferentes oacuterdenes religiosas fueron muy dispares como bien es sabido No eran iguales los planteamientos teoloacute-gicos de los dominicos que los de los franciscanos o los de los carmelitas que los de los agustinos o jesuitas Era necesario por lo tanto tener acceso a estas fuentes de informa-cioacuten para poder constrastar las diferencias y hacer valoraciones propias (Vigil 237-38) El escritor espantildeol Caro Baroja destaca el caraacutecter enciclopeacutedico del catolicismo donde se han integrado corrientes y posturas muy dispares que a traveacutes del diaacutelogo daban cierto espacio al creyente con maacutes curiosidad intelectual para que este pudiese compa-rar y valorar las diferentes opciones que se le ofreciacutean (Vigil 237-38)

Varias de estas mujeres intelectuales fueron hijas de conquistadores que aunque na-cidas en suelo americano seguiacutean expresaacutendose en la lengua de sus padres con no me-nos fuerza que sus contemporaacuteneas peninsulares Es cierto que existieron numerosas escritoras en el Nuevo Mundo durante el siglo XVIII algunas dedicadas incluso al estudio de las matemaacuteticas como la mexicana Dontildea Francisca Gonzaga y Castillo Pero para limitar el presente trabajo a los siglos XVI y XVII uacutenicamente se incluiraacuten ejemplos de estos dos siglos

La peruana Josefa de Alarcoacuten publicoacute en 1648 unas liras dedicadas a las Exequias del Priacutencipe Baltasar Carlos

Cifro en capilla breveEl tribunal de la Magestad maacutes graveEn fe de lo que debeA Carlos que en dos mundos no cabe141

El caso de Sor Jeroacutenima de la Asuncioacuten es muy interesante una mujer que tuvo la oportunidad de viajar a Meacutexico y posteriormente a las Filipinas para cumplir con las mi-siones que le habiacutean sido encomendadas por su orden Nacida en Toledo en 1555 en el seno de una noble y acaudalada familia estuvo destinada a recorrer el mundo ofrecien-do sus servicios a todos los necesitados distinguieacutendose por su ardiente caridad laquovien-do que los galeotes eran tratados con dureza excesiva sobre todo cuando los llevaban de un pueblo a otro procuroacute aliviar las penas de aquellos desgraciados y lo consiguioacute en parteraquo (Serrano y Sanz 268 65) Hija del licenciado e ilustre jurista Pedro Garciacutea Yaacute-ntildeez y de dontildea Catalina de la Fuente ingresoacute contra su voluntad en el monasterio de las Clarisas de Santa Isabel de los Reyes (Toledo) el 5 de agosto de 1570 (Trevintildeo 46) hay que decir que eacutesta no seraacute la uacutenica voluntad contra la que tuvo que luchar

Sor Jeroacutenima se embarcoacute para Meacutexico y de alliacute partioacute hacia Manila junto con siete compantildeeras en el famoso laquoGaleoacuten de Manilaraquo que saliacutea anualmente del puerto mexi-cano de Acapulco Su viaje a las Filipinas duroacute un antildeo y tres meses desde su salida de Espantildea tiempo en el que demostroacute un gran valor y determinacioacuten por el soacutelo hecho de

141 Manuel Serrano y Sanz Apuntes para una biblioteca de escritoras espantildeolas desde el antildeo 1401 al 1833 vols 268 269 270 271 Biblioteca de Autores Espantildeoles (Madrid Atlas 1975) 268 19

162 JUAN FRANCISCO MAURA

embarcarse en tan precarias naves Fue la primera misionera de Oceaniacutea muriendo en Manila en 1621 Alliacute fundoacute el monasterio de Santa Clara que perviviriacutea hasta ser bom-bardeado en la Segunda Guerra Mundial (Trevintildeo 47) Escribioacute su Vida donde trata de la fundacioacuten del convento y de todas las tribulaciones mdashllegoacute a ser excomulgadamdash y satisfacciones que una vida dedicada a una causa justa proporciona Tambieacuten escribioacute una obra de caraacutecter filosoacutefico-teoloacutegico titulada Carta de marear en el mar del mundo nombre alegoacuterico que da cuenta de la enorme distancia recorrida a traveacutes del laquomar del espiacuterituraquo por sor Jeroacutenima He aquiacute algunos de sus versos de caraacutecter religioso

Vuestra soy para vos naciacuteiquestQueacute mandaacuteis hacer de miacute Inaccesible grandezaEterna Sabiduriacuteay bondad del alma miacuteaDios un ser poder y Altezamirad la suma pobrezade eacutesta que se ofrece aquiacuteiquestQueacute mandaacuteis hacer de miacute (Serrano y Sanz 268 66)

Ya en Meacutexico tenemos otro ejemplo de una mujer dedicada por completo a Dios y al estudio y composicioacuten de obras de caraacutecter teoloacutegico Dontildea Ana Mariacutea del Costa-do de Cristo nacida en la ciudad de Tlaxcala hacia el antildeo 1650 Tomoacute la orden de San Francisco para consagrarse a las labores de su orden y a la escritura Se dice que con los escritos de Dontildea Ana Mariacutea se podriacutean formar veinte tomos (Serrano y Sanz 268 282) Estas son algunas de sus obras Vida y muerte de Jesucristo Nuestro Sentildeor Vida del Seraacutefico Padre San Francisco de Asiacutes Vida de la iacutenclita Virgen Santa Clara Vida del sutiliacutesimo doctor Juan Duns Escoto

Pero no todas las monjas tuvieron vidas tan dedicadas al estudio y la oracioacuten Loacutegica-mente entre un nuacutemero tan grande de mujeres existioacute de todo y seriacutea un error pensar que todos los conventos femeninos estaban integrados por laquocaacutendidas palomasraquo Una monja en el siglo XVI y XVII teniacutea mucha maacutes fuerza que una mujer ordinaria ya que actuaban en grupo y la entrada a los recintos donde viviacutean estaba permitida solo a mu-jeres Esta situacioacuten las haciacutea mucho maacutes fuertes a todos los niveles que una mujer sola protegida uacutenicamente por su familia laquoLas monjas durante los siglos XVI y XVII lucharon por eludir la clausura y por zafarse del control que los frailes de las secciones masculi-nas de sus congregaciones ejerciacutean sobre ellasraquo (Vigil 230) Soacutelo un antildeo maacutes tarde que dontildea Ana Mariacutea del Costado de Cristo en 1651 y a 12 leguas de Meacutexico nacioacute la sin par Sor Juana Ineacutes de la Cruz hija de don Pedro Manuel de Asbaje natural de Vergara (Vizcaya) y de Dontildea Isabel Ramiacuterez de Santillana hija de espantildeoles (Serrano y Sanz 268 289) Por ser sin lugar a dudas la poeta maacutes importante de su tiempo y probable-mente la maacutes conocida del mundo hispano no profundizaremos en ella Su obra es un canto a la inteligencia y el exponente maacutes destacado de la literatura barroca americana tanto en prosa como en verso Destacareacute simplemente que Sor Juana Ineacutes pese a vivir en un sociedad donde no eran excesivas las libertades concedidas a las mujeres tuvo el caraacutecter y la determinacioacuten de dejarnos las maacutes bellas poesiacuteas amorosas que si bien estuvieron enmarcadas en un ambiente religioso como era de esperar por su condicioacuten

163ESPANtildeOLAS DE ULTRAMAR EN LA HISTORIA Y EN LA LITERATURA

pudieron transcender como unas de las maacutes bellas manifestaciones literarias que hoy en diacutea se conservan Fue su agudeza mental sensibilidad y cultura tal que no fueron suficientes los soacutelidos muros del convento para contener el genio de tan extraordinaria mujer Recordemos sus conocidiacutesimos versos en defensa de las mujeres

Hombres necios que acusaacuteisa la mujer sin razoacutensin ver que sois la ocasioacutende lo mismo que culpaacuteis142

Las metaacuteforas y la delicadeza que emplea en rebatir a su obispo en su laquoRespuesta a sor Filotea de la Cruzraquo no son solamente el epiacutetome del feminismo de su tiempo sino una de las maacutes brillantes manifestaciones del barroco hispano Poesiacutea teatro ensayo y un conocimiento extraordinario de las ciencias claacutesicas de su tiempo hacen de esta mujer un ejemplo extraordinario de las letras universales Ya son cientos los artiacuteculos y libros que se han escrito sobre Sor Juana y no dejan de aparecer tesis doctorales sobre los maacutes diversos temas conectados con la citada autora143 Como nos dice Stephanie Merrim en su documentada obra Early Modern Womenrsquos Writing and Sor Juana Ineacutes de la Cruz

She wrote and published on secular themes as atypical for a nun as human love Her remarkably extensive writings essayed and reenacted most of the (male) poetic dramatic theological and even philosophi-cal discourses of her times in the metropolis making her works a com-pendium of baroque culture in its diversity and syncretism Sor Juana self-creation as a learned women effectively toppled many of the walls in which she was materially enclosed and positioned her within the dynamic world of early modern European culture (xii)

No se debe dejar de mencionar a otras escritoras novohispanas de la eacutepoca que aun-que no fueron tan proliacuteficas y relevantes como Juana Ineacutes de la Cruz dejaron testimo-nio de algunos acontecimientos que tienen intereacutes socioloacutegico o testimonial Este es el caso de Dontildea Mariacutea Estrada Medinilla de igual nombre y apellido que la mujer que acompantildeoacute a las tropas de Corteacutes en su primera entrada a Meacutexico Natural de Meacutexico publicoacute toda su obra a mediados del siglo XVII concentraacutendose principalmente en la lle-gada del Marqueacutes de Villena virrey y capitaacuten general de la Nueva Espantildea a la ciudad de Meacutexico en el antildeo 1640 Escrita en octavas reales la obra trata de las fiestas de toros y cantildeas con que se obsequioacute al citado virrey Fue impresa en Meacutexico en 1641 (Serrano y Sanz 269 402)

Mucho maacutes importante para el presente libro es Dontildea Isabel de Guevara que escribioacute en 1556 la carta en que se expone la ayuda que ofrecieron las mujeres en el descubri-miento y conquista del Riacuteo de la Plata No cabe la menor duda de que esta carta es uno

142 Para una mejor comprensioacuten del caraacutecter de esta excepcional mujer veacutease entre los numeros trabajos publicados Fredo Arias de la Canal Intento de psicoanaacutelisis de Juana Ineacutes y otros ensayos sorjuanistas (Meacutexico Frente de Afirmacioacuten Hispanista 1972) 47

143 Veacuteanse entre otros trabajos Octavio Paz Sor Juana Ineacutes de la Cruz o las trampas de la fe Georgina Sabat de Rivers En busca de Sor Juana Margo Glantz Sor Juana la comparacioacuten y la hipeacuterbole Gerard C Flynn Sor Juana Ineacutes de la Cruz Stephanie Merrim Feminist perspectives on Sor Juana Ineacutes de la Cruz Pamela Kirk Sor Juana Ineacutes de la Cruz religion art and feminism

164 JUAN FRANCISCO MAURA

de los documentos maacutes importantes con que contamos en relacioacuten a la aportacioacuten fe-menina en el proceso de la conquista de Ameacuterica Su importancia viene dada por varios factores Primero es uno de los primeros testimonios mdashsi no el primeromdash en donde se expone abiertamente la indispensable colaboracioacuten de las mujeres en el descubrimien-to y conquista de tierras en el Nuevo Mundo laquoQue si no fuera por ellas todos fueran acabadosraquo En segundo lugar la informacioacuten vertida en estas liacuteneas presenta en parte la manera de pensar de una mujer espantildeola en tales circunstancias Extraordinario tes-timonio de primera mano que nos da una idea de lo que significoacute en muchos casos el valor y entrega constantes de muchas de estas mujeres que auacuten a riesgo de perder sus vidas no dudaron en luchar al lado de los hombres por una causa que consideraban laquocomuacutenraquo

La relevancia histoacuterica de dicha carta hace que merezca ser transcrita en su totali-dad

Carta de dontildea Isabel de Guevara a la princesa gobernadora dontildea Juana exponiendo los trabajos hechos en el descubrimiento y conquista del Riacuteo de la Plata por las mujeres para ayudar a los hombres y pidiendo repartimiento

para su marido Asuncioacuten 2 de julio de 1556

Muy alta y muy poderosa sentildeora

A esta provincia del Riacuteo de la Plata con el primer gobernador de ella don Pedro de Mendoza hemos venido ciertas mujeres entre las cuales ha querido mi ventura que fuese yo la una y como la armada llegase al puerto de Buenos Aires con mil quinientos hombres y les faltase el bastimento fue tamantildea el hambre que a cabo de tres meses murie-ran los mil esta hambre fue tamantildea que ni la de Jerusalem se le puede igualar ni con otra ninguna se puede comparar Vinieron los hombres en tanta flaqueza que todos los trabajos cargaban de las pobres mu-jeres asiacute en lavarles las ropas como en curarles hacerles de comer lo poco que teniacutean limpiarlos hacer centinela rondar los fuegos armar las ballestas cuando algunas veces los indios les veniacutean a dar guerra hasta cometer a poner fuego en los versos y a levantar los soldados los que estaban para ello dar arma por el campo a voces sargentean-do y poniendo en orden los soldados porque en este tiempo como las mujeres nos sustentamos con poca comida no habiacuteamos caiacutedo en tanta flaqueza como los hombres Bien creeraacute V A que fue tanta la so-licitud que tuvieron que si no fuera por ellas todos fueran acabados y si no fuera por la honra de los hombres muchas maacutes cosas escribiera con verdad y los diera a ellos por testigos Esta relacioacuten bien creo que la escribiraacuten a V A maacutes largamente y por eso cesareacute Pasada esta tan peligrosa turbunada determinaron subir el riacuteo arriba asiacute flacos como estaban y en entrada de invierno en dos bergantines los pocos que quedaron vivos y las fatigadas mujeres los curaban y los miraban y les guisaban la comida trayendo la lentildea a cuestas fuera del naviacuteo y animaacutendolos con palabras varoniles que no se dejasen morir que presto dariacutean en tierra de comida metieacutendolos a cuestas en los

165ESPANtildeOLAS DE ULTRAMAR EN LA HISTORIA Y EN LA LITERATURA

bergantines con tanto amor como si fueran sus propios hijos Y como llegamos a una generacioacuten de indios que se llaman tinbues sentildeores de mucho pescado de nuevo los serviacuteamos en buscarles diversos modos de guisados porque no les diese en rostro el pescado a causa de que lo comiacutean sin pan y estaban muy flacos Despueacutes determinaron subir el Paranaacute arriba en demanda de bastimento en el cual viaje pasaron tanto trabajo las desdichadas mujeres milagrosamente quiso Dios que viviesen por ver que en ellas estaba la vida de ellos porque todos los servicios del naviacuteo los tomaban ellas tan a pechos que se teniacutea por afrentada la que menos haciacutea que otra sirviendo de marear la vela y gobernar el naviacuteo y sondar de proa y tomar el remo al soldado que no podiacutea bogar y escotar144 el naviacuteo y poniendo por delante a los soldados que no se desanimasen que para los hombres eran los trabajos verdad es que a estas cosas ellas no eran apremiadas ni las haciacutean de obliga-cioacuten ni las obligaba si solamente la caridad Asiacute llegaron a esta ciudad de la Asuncioacuten que aunque ahora estaacute muy feacutertil de bastimentos en-tonces estaba de ellos muy necesitada que fue necesario que las muje-res volviesen de nuevo a sus trabajos haciendo rosas con sus propias manos rosando y carpiendo y sembrando y recogiendo el bastimento sin ayuda de nadie hasta tanto que los soldados guarecieron de sus fla-quezas y comenzaron a sentildeorear la tierra y adquirir indios e indias de su servicio hasta ponerse en el estado en que ahora estaacute la tierra He querido escribir y traer a la memoria de V A para hacerle saber la ingratitud que conmigo se ha usado en esta tierra porque al presente se repartioacute por la mayor parte de los que hay en ella asiacute de los anti-guos como de los modernos sin que de miacute y de mis trabajos se tuviese ninguna memoria y me dejaron de fuera sin me dar indio ni ninguacuten geacutenero de servicio Mucho me quisiera hallar libre para me ir a presen-tar delante de VA con los servicios que a SM he hecho y los agravios que ahora se me hacen mas no estaacute en mi mano porque estoy casada con un caballero de Sevilla que se llama Pedro de Esquivel que por servir a SM ha sido causa que mis trabajos quedasen tan olvidados y se me renovasen de nuevo porque tres veces le saqueacute el cuchillo de la garganta como allaacute VA sabraacute A que suplico mande me sea dado mi repartimiento perpetuo y en gratificacioacuten de mis servicios [en el origi-nal del AHN Diversos doc 141 dice ademaacutes mande que sea proveydo mi marido de alguacuten cargo conforme a la calidad de su persona pues el de su parte por sus servicios lo merece] lo merece Nuestro sentildeor acre-ciente su Real vida y estado por muy largos antildeos De esta ciudad de la Asuncioacuten y de julio 2 1556 antildeosServidora de V A que sus Reales manos besa

Dontildea Isabel Guevara

144 Sacar agua de un riacuteo acequia o presa

166 JUAN FRANCISCO MAURA

Sobremdash A la muy alta y muy poderosa sentildeora Princesa dontildea Joana Gobernadora de los reinos de Espantildea etc ndash En su Consejo de Indias (Isabel de Guevara 619-21)

Iroacutenicamente la carta teniacutea que llegar a manos de la desdichada heredera del trono de Castilla e hija de los Reyes Catoacutelicos Juana laquola Locaraquo que habiacutea muerto el antildeo an-terior Son profeacuteticas las palabras de esta mujer no soacutelo porque sus hechos personales quedasen en el olvido sino porque incluso se ha borrado la historia de las mujeres en el Nuevo Mundo negando su presencia Por lo menos Isabel Guevara tuvo acceso a una pluma iquestCuaacutentas seriacutean las que ni siquiera sabriacutean escribir

Otra contemporaacutenea fue dontildea Leonor de Iciz que vivioacute durante la segunda mitad del siglo XVI Interesa sobre todo por los sonetos que escribioacute en elogio de Ercilla soldado que participoacute en la conquista de Chile y que se inmortalizoacute con su obra La Araucana (Serrano y Sanz 269 534) Lo mismo hizo Dontildea Bernarda Lintildeaacuten en 1610 autora de otro soneto en memoria del capitaacuten Gaspar Peacuterez de Villagraacute que participoacute en la conquista de Nuevo Meacutexico (Serrano y Sanz 270 14) Los escritos de estas mujeres tratan de de dos de las eacutepicas maacutes dramaacuteticas de la conquista

En el Peruacute y en pleno siglo XVII aparece otra fundadora de conventos Sor Bernardina de Jesuacutes que ademaacutes fue comparada con Santa Teresa por la semejanza de sus laquocartasraquo con las de la santa de Avila Fue fundadora del convento de Tacunga en Quito maacutes tarde destruiacutedo por un terremoto Dice Serrano y Sanz con respecto a su biografiacutea un tanto legendaria que fue carmelita descalza de Lima y hermana de Dontildea Mariacutea Benavides y Esquivel abuela de D Pedro de Peralta Barnuevo (Serrano y Sanz 269 553) Dicen que esta santa se alimentoacute durante treinta antildeos con laquochochos y caacutescaras de naranja hecho tan raro como increiacuteble Cuando fallecioacute reparaban las monjas en ponerle una vara de azucenas porque habiacutea sido casada y aquellas flores aparecieron milagrosamente sobre el cadaacuteverraquo (Serrano y Sanz 269 553)

Otra limentildea del primer cuarto del siglo XVII con reputacioacuten de santa fue Dontildea Luisa Melgarejo En este caso no se trata de una religiosa de oficio sino de la mujer del doctor Juan de Soto La uacutenica diferencia es que dontildea Luisa al parecer teniacutea laquovisiones y reve-lacionesraquo lo que debioacute poner nervioso a maacutes de un miembro del tribunal del laquoSanto Oficioraquo que consideraron sus escritos laquoculpadosraquo De su papel de laquosantaraquo pasa por lo tanto al de laquoposesaraquo o laquoendemoniadaraquo El inquisidor de Lima Gaitaacuten escribioacute un infor-me donde a traveacutes de la opinioacuten puacuteblica y de otras averiguaciones se deciacutea que dontildea Luisa Melgarejo laquomujer santaraquo sabiacutea cuando las almas de los difuntos saliacutean del Purga-torio El diacutea 14 de noviembre de 1623 se decidioacute tomar posesioacuten de todos los cuadernos en los que habiacutea escrito las experiencias de todos sus laquoarrobos suspensiones extasis y revelacionesraquo Estos cuadernos una vez recogidos presentaron toda una serie de al-teraciones borrones adiciones enmiendas incluso diferente letra por lo que despueacutes de haber sido examinados resultaron culpables145 Excelente imaginacioacuten debioacute tener dontildea Luisa Melgarejo la suficiente al parecer para convencer a algunos miembros de la iglesia de que en sus escritos laquohabiacutea algoraquo que mereciacutea la pena Estas cosas ocurriacutean en Lima uno de los centros culturales maacutes importantes de la vida social y poliacutetica en la Ameacuterica espantildeola Lima a comienzos del siglo XVII seguacuten el empadronamiento llevado

145 Serrano y Sanz 270 47 Veacutease J T Medina Historia del tribunal del Santo Oficio de la Inquisicioacuten de Lima (1569-1820) (Santiago Imprenta Gutemberg 1887) Tomo II 34-41

167ESPANtildeOLAS DE ULTRAMAR EN LA HISTORIA Y EN LA LITERATURA

a cabo en 1614 por el marqueacutes de Montesclaros era una ciudad de 25000 habitantes de los que 11000 eran espantildeoles El nuacutemero de religiosos y religiosas llegaba a 1720 (Pittaluga 77)

Se sabe que en la Isla de Santo Domingo durante el siglo XVI nacioacute o al menos resi-dioacute una poeta de ceacutelebre apellido en los aconteceres del Nuevo Mundo Dontildea Elvira de Mendoza de la que se conserva un manuscrito en la Real Academia de la Historia laquoCantares miacuteos que estaacuteis rebeladosraquo Eugenio de Salazar hace un elogio de ella como poeta en un Soneto a la ilustre Poeta y Sentildeora Dontildea Elvira de Mendoza moradora en la ciudad de Santo Domingo (Serrano y Sanz 270 53)

Nacida en Burgos sobre el antildeo 1590 dontildea Luisa de Padilla merece un lugar aparte dentro del grupo de mujeres escritoras de su eacutepoca Por su estilo faacutecil y castizo su no-vedad de pensamientos y su rica erudicioacuten recibioacute el siguiente comentario de Manuel Serrano y Sanz laquoPocas figuras hay en nuestra historia literaria femenil que puedan compararse a esta eminente prosista acaso la maacutes notable de cuantas florecieron en Es-pantildea durante el siglo XVIIraquo (Serrano y Sanz 270 95-96) Este comentario y comparacioacuten deberiacutea ampliarse para que tambieacuten incluyese a laquola historia literaria varonilraquo

Dontildea Luisa fue defensora de la labor que la Inquisicioacuten estaba realizando en la laquolim-piezaraquo de mujeres laquosoldados del demonioraquo que existieron en algunas provincias espa-ntildeolas en aquel tiempo Muchas de las mujeres que combinaban la magia con los po-deres curativos fueron condenadas no solamente por hombres de la Inquisicioacuten sino tambieacuten por mujeres de todas las clases sociales como es el caso de Luisa de Padilla condesa de Aranda En su obra Elogios de la verdad e invectiva contra la mentira preveniacutea contra aquellos que practicaban artes en contra de la religioacuten cristiana La magiacutea negra seguacuten Padilla era la causante de que muriesen casi tantas personas como otras causas naturales habieacutendose descubierto hasta seis mil brujas en Vizcaya y Guipuzcua con-fesando una mujer de un pueblo pequentildeo haber matado con su laquomagiaraquo a ochocientas personas (Perry 31) Eran estos laquomales de ojoraquo y maldiciones seguacuten la autora las causas de que se secasen los pechos de las madres lactantes que se separasen las parejas casa-das y que abortasen las embarazadas (Perry 31)

Si se tiene en cuenta que dontildea Luisa estuvo emparentada con la maacutes rancia aristocra-cia de su tiempo o lo que es lo mismo con algunos de aquellos que en cierta manera dirigiacutean los destinos de Espantildea en aquella eacutepoca (Duques de Lerma Duque de Uceda Marqueacutes de Cueacutellar Conde de Santa Gadea Marqueacutes de Belmonte por citar algunos) se comprenderaacute mejor su identificacioacuten con una institucioacuten que en teoriacutea velaba por la salvaguarda de los valores laquoeternosraquo de una Espantildea destinada a ser la campeona del ca-tolicismo durante los siglos XVI y XVII El padre de dontildea Luisa fue don Martiacuten de Padilla y Manrique extraordinario militar que proboacute su valor contra enemigos moriscos ingle-ses holandeses piratas berberiscos y el renegado genoveacutes Muley Faxad Fue veterano de la batalla de Lepanto donde apresoacute a cuatro galeras y acompantildeoacute con su escuadra a la reina Dontildea Margarita de Austria cuando vino de Geacutenova en 1598 laquoHabiacutea obtenido a 24 de julio de 1587 el tiacutetulo de Conde de Santa Gadea y en 1596 el de Capitaacuten General de la Armada del mar Oceacuteanoraquo (Serrano y Sanz 27095-96)

Por otra parte tambieacuten se sabe que dontildea Luisa participoacute directamente y desde tem-prana edad en la praacutectica de algunas actividades intelectuales como la historia y la arqueologiacutea a la vez que dedicaba su tiempo a virtudes cristianas como la caridad y el socorro de los necesitados (Serrano y Sanz 270 97) Resulta mucho maacutes faacutecil compren-

168 JUAN FRANCISCO MAURA

der la postura ideoloacutegica de esta gran mujer si tienen en cuenta ademaacutes de los factores antes mencionados otros tantos de caraacutecter biograacutefico concernientes a su educacioacuten y matrimonio

Otra escritora fue la mexicana dontildea Mariacutea Casilda Pozo natural de Temestla (Meacutexi-co) Nacida en el mes de abril de 1682 dejoacute escrita su biografiacutea en 16 cuadernos el ma-nuscrito original se encuentra en la biblioteca del colegio de San Gregorio de Meacutexico Fue su confesor el jesuiacuteta Domingo Quiroga que fue quieacuten la incitoacute a escribir su obra (Serrano y Sanz 270 137) Sor Juana de San Antonio aparece a principios del siglo XVII formando parte de un grupo de religiosas espantildeolas que fueron a Manila por la ruta de Meacutexico Ademaacutes de distinguirse por sus cualidades personales su obra interesa por ofrecer informacioacuten testimonial y costumbrista acerca de la forma de vestir de chinos y japoneses (Serrano y Sanz 270 225)

Otra monja esta vez ecuatoriana fue Gertrudis de San Ildefonso Nacida en 1652 profesoacute su vocacioacuten en el convento de Santa Cruz de Quito dejando escrita su vida por mandato de su confesor el padre Martiacuten de la Cruz el cual hizo una biografiacutea laquoen tres gruesos voluacutemenesraquo Gertrudis de San Ildefonso murioacute en 1709 (Serrano y Sanz 270 300) en olor de santidad

Sor Mariacutea Ana Agueda de San Ignacio nacioacute el 3 de marzo de 1695 en la dioacutecesis de la puebla de los Angeles en un rancho del lugar de Santiago Tecaliacute (Serrano y Sanz 270300) Esta monja mexicana escribioacute varias obras durante su vida conventual a lo largo de la cual desempentildeoacute el cargo de priora por muchos antildeos Entre sus obras todas de caraacutecter piacuteo y de laquoamor divinoraquo escribioacute un curioso y laquocopiosoraquo tratado de la Leche virginal de la Soberana Madre de Dios El padre Fr Juan de Villa Saacutenchez hace el siguiente comentario al respecto laquoen que hablando primero en sentido natural de los beneficios que debemos a Nuestra Sentildeora pasa a tratar en sentido miacutestico y alegoacuterico enten-diendo en la leche la doctrinaraquo (Serrano y Sanz 270301) Mexicana fue tambieacuten Sor Petronila de San Joseacute que ejercioacute como abadesa del Real monasterio de Jesuacutes Mariacutea de la ciudad de Meacutexico Escribioacute Vidas de varias religiosas ejemplares obra que tiene su im-portancia ya que al parecer laquoDe esta obra se sirvioacute D Carlos de Siguumlenza y Goacutengora para escribir su Parayso Occidental (Meacutexico 1684) seguacuten eacutel mismo declara en el proacutelogo diciendo lsquoa quien si hay algo bueno en esta historia se le debe todorsquoraquo (Serrano y Sanz 270 354) Menos conocida fue su compatriota Sor Luisa de Santa Catalina natural de Xacona laquopueblo situado en las inmediaciones de Zamora (Meacutexico)raquo siendo bautizada en 1682 Escribioacute Cartas espirituales a su confesor el P Juan Loacutepez de Aguado (Serrano y Sanz 270 361-62)146

Todos estos escritos la mayoriacutea de ellos ignorados por el gran puacuteblico tienen la im-portancia de darnos una perspectiva diferente En otras palabras ensentildearnos la maacutes refinada sensibilidad de muchas mujeres que permanecieron y en su mayoriacutea siguen permaneciendo a laquooscurasraquo de una eacutepoca tan rica de la literatura espantildeola como fue el Siglo de Oro Este siglo fue tambieacuten en su dimensioacuten literaria y artiacutestica patrimonio de la mujer

146 Para profundizar en muchas de estas escritoras hispano-americanas la consulta de la Biblioteca Hispano-Americana de Beristain de Souza resulta de capital importancia

169ESPANtildeOLAS DE ULTRAMAR EN LA HISTORIA Y EN LA LITERATURA

Sor Nada ardores divinos de una monja adolescente escritos ineacutedi-tos de una recieacuten profesa del siglo XVI147

iexclQueacute encantadores son tus amores hermana miacutea espo-sa iexclQueacute deliciosos son tus amores maacutes que el vino Y el aroma de tus perfumes es mejor que el de los baacutelsamos Miel virgen destilan tus labios esposa miel y leche hay en tu lengua y el perfume de tus vestidos es como aroma de incienso (Cantar de los Cantares 4 10-11)

Sor Nada llamada asiacute por humildad seguacuten dice el Indice de manuscritos de la Biblio-teca Nacional de Madrid es uno de los ejemplos maacutes desconocidos e interesantes que tenemos de la poesiacutea y prosa amoroso-religiosa del siglo XVII Hasta la fecha nunca se habiacutea publicado su obra e incluso hasta el antildeo 1995 para mi sorpresa no habiacutea copias microfilmadas de sus manuscritos en la Biblioteca Nacional Serrano y Sanz en su libro Apuntes para una Biblioteca de Escritoras Espantildeolas hace una escueta y pasajera mencioacuten de esta mujer y de su obra (68-69) siendo eso todo lo que hasta ahora se sabiacutea de ella Sus escritos consisten en los siguientes manuscritos

1 laquoEn queacute consiste un verdadero amor de Diosraquo 9 hojas uacutetiles en 4ordm letra del siglo XVII Biblioteca Nacional de Espantildea Manuscrito 1295926

2 laquoPintura del Propio Amorraquo laquoPintura del propio Amorraquo 10 hojas uacutetiles en 4ordm letra del siglo XVII Biblioteca Nacional de Espantildea Manuscrito 1295927

3 laquoEsplicacioacuten sobre en queacute consiste la paz del Almaraquo laquoQuartillas aacute un Alma que padece soledad interiorraquo 7 hojas uacutetiles en 4ordm letra del siglo XVII Biblioteca Nacio-nal de Espantildea Manuscrito 1295828

En cuanto a su persona soacutelo se nos dice que laquose encubrioacute con este seudoacutenimo laquoSor Nadaraquo Esta monja desconocida de origen hispanoamericano posee toda la frescura e ingenuidad de una joven apasionada metida por vocacioacuten u obligacioacuten a ejercer la profesioacuten maacutes comuacuten para mujeres de cierta clase social de su tiempo En sus liacuteneas podemos encontrar un misticismo simple incluso en algunos momentos infantil pero a su vez lleno de una fuerza y sensualidad interior poco comuacuten en escritos de este geacute-nero que desborda los liacutemites del laquoamor divinoraquo a traveacutes de los diaacutelogos entre el Alma y el Esposo Sor Nada consigue proyectar su amor a Dios maacutes allaacute de una experiencia romaacutentica Su experiencia es sincera y genuinamente miacutestica trascendiendo la imita-cioacuten o la propia creacioacuten poeacutetica ficcionalizada (Hatzfeld 30) Algunos pasajes son de un

147 Veacutease mi artiacuteculo Sor Nada ardores divinos de una monja adolescente escritos ineacuteditos de una monja profesa del siglo XVIIraquo Espeacuteculo Revista de estudios literarios 26 (2004) 1-10 Universidad Complutense de Madrid http wwwucmesinfoespeculonumero26sornadahtml

170 JUAN FRANCISCO MAURA

alto contenido eroacutetico con sustantivos y metaacuteforas que recuerdan la maacutes iacutentima unioacuten amorosa en unos casos y el tierno amor maternal en otros

[T]e miro Jesus mio desnudo a las inclemencias del tiempo y ardien-do en puro fuego de Amor por la salud de las Almas y me ensentildeas a que te ame con todo mi corason y puresa de espiritu No atendiendo ni buscando umanos intereses ni a solisitar consuelos ni regalos espi-rituales que suelen empantildear la puresa del noble corason No mi Jesus amable pues antes me ensentildeaste tu puro Amor que desnudo sean [sic] de encaminar mis passos desde el pesebre asta la cuna en donde te miro tan desnudo como el pesebre y todo Sentildeor por mi Amor (Mss 12959 26 hoja 1 v)

El manuscrito (12959 27) de la mencionada serie de tres contiene algunas correccio-nes quizaacute hechas por el confesor o quizaacute por ella misma cuando se dirige con excesiva familiaridad y arrebatado fervor a su Amado148 He escogido el manuscrito (12959 Caja 28) en primer lugar por ser el ejemplo maacutes representativo de su poesiacutea y prosa En este manuscrito encontramos de forma maacutes directa que alegoacuterica toda la frescura de un diaacutelogo entre Jesuacutes y el alma que raya como diriacutea Cervantes laquoa la llana y sin rodeosraquo (667 lib 2 cap 38) con el doloroso y a veces desesperado deseo de la entrega y la unioacuten final con el Amado La ortografiacutea no ha sido corregida respetaacutendose el texto ori-ginal149 Veamos el siguiente fragmento

Mira que te amo con Amor de padre y con Amor de esposo el mas fino y puro enamorado que no tan solo me presio de darte mi mano sino tambien todo mi cuerpo y sangre para que con mi pan de vida te sustentes y te regales a tus anchuras y que con mi propio espiritu vivas en paz como tu lo deseas y que mis amores sean unico alivio en tus trabajos en esta mortal vida pues si esto es asi y sabes que muero por darte vida dime esposa mia de que te fatigas Dame querida tus bras-sos y dime si me amas como yo te amo (Hoja 4)

148 La antologiacutea de Promis ha procurado insertar entre los textos antoloacutegicos algunos que se refieren a la es-critura de mujeres fundamentalmente de aquellos generados en el interior de los espacios conventuales Estos textos se fundan como laquohistorias de vidasraquo y responden casi siempre a los requerimientos de los confesores de las monjas coloniales En este sentido resulta valiosiacutesima la incorporacioacuten de la llamada Relacioacuten autobiograacute-fica de Sor Ursula Suaacuterez como una muestra significativa de la escritura monjil entendida en esta eacutepoca (como tambieacuten en la tradicioacuten europea medieval) inserta en las denominadas laquolabores de manoraquo de las religiosas ya que el texto escrito por mandato se convertiacutea en una suerte de entramado o tejido linguumliacutestico es decir en un nuevo bordado que la mayor parte de las veces el confesor convertido en censor iba haciendo tachando y enmendando En la antologiacutea Promis agrega un texto de Sor Tadea Garciacutea de la Huerta titulado Relacioacuten de la inundacioacuten que hizo el riacuteo Mapocho de la ciudad de Santiago de Chile en el monasterio de Carmelitas titular de San Rafael el diacutea 16 de junio de 1783 se trata de un poema tipo romance escrito en versos octosilaacutebicos y que da cuenta de lo sucedido ese diacutea en el convento (Resentildea de la literatura del reino de Chile de Joseacute Promis Eddie Morales Pintildea httpwwwupaclpublicaciones2002literatura_promishtm)

149 Son frecuentes las faltas ortograacuteficas Una de ellas es el uso constante del seseo La ausencia de acentua-cioacuten y puntuacioacuten exceptuando alguacuten punto o coma arbitrario no seguido casi nunca de mayuacutescula inicial lo mismo que el uso igualmente aribitrario de la h o de b v r q g j m n x etc No olvidemos de la misma forma la laxitud linguumliacutestica existente en el siglo XVII (no sabemos a queacute parte de eacuteste pertenece el manuscrito) asiacute como la joven edad de la monja

171ESPANtildeOLAS DE ULTRAMAR EN LA HISTORIA Y EN LA LITERATURA

Los versos del presente manuscrito poseen la misma fuerza que tiene su prosa Con una estructura estroacutefica indefinida estaacuten aparentemente corregidos por alguien que tu-vo la oportunidad de conocer personalmente a la autora Muy probablemente se trate del padre al que hace referencia al principio del primer manuscrito laquoMandame el Pd que le declare en que consiste un verdadero amor a Diosraquo a continuacioacuten continuacutea con su caracteriacutestica humildad laquo[O]bedesere y dire lo q Dios me inspire segun mi rudesa y simplisidadraquo (Mss 12959 26) En cuanto a la fuerza pasional de esta joven observamos con cierta tristeza coacutemo aparece sublimada en sus escritos con toda la enegiacutea de una joven mujer llena de intensidad y vida pero encerrada en los liacutemites de un convento Veamos un ejemplo en donde responde el Alma en los siguientes versos

O mi enamorado Jesus O mi dulse y tierno amanteO alegria de los sielos O dulse Jesus amable

(Toda Sentildeor me derrito toda Sentildeor me desagoy quiero vivir por ti ea sentildeor abrasadme) [Tachado en el original]

Toda Sentildeor me derrito toda Sentildeor me desagoy quiero morir por vos ea Sentildeor que ya acabo

Ya tus amores me llaman ya tus perfumes me traencon suspiros y agonias Sentildeor hasta que te alcanse

O mi Jesus amoroso no puedo mas dilatarmeya la pasiensia me falta dulse Jesus abrasadme

(No puedo vivir sin vos no puedo mas dilatarmeya la pasiensia me falta dulse) [Tachado en el original]

No puedo vivir sin vos mi dulse Jesus amablepues me teneis echisada siendo mi esposo y mi Padre

Ay que me abraso Ay que me quemo del Amor deJesus nasareno como no tocan y tantildeen a fuego150

Estos versos llenos de arrebato sublimado conectan con toda la tradicioacuten miacutestica es-pantildeola que se remonta a Ramoacuten Llul y que culmina en el maacutes universal de nuestros

150 En toda la fuerza y simbologiacutea del amor maacutes iacutentimo del maacutes alto y sublime placer de la unioacuten de los amantes tal como lo encontramos en el Cantar de los Cantares y en San Juan de la Cruz Leemos en la Biblia

Ya me he quitado la tuacutenica iquestCoacutemo volver a vestirme Ya me he lavado los pies iquestCoacutemo volver a ensuciarlosMi amado metioacute su mano por el agujero (de la llave) y mis entrantildeas se estremecieron por eacutel Me levanteacute para abrir a mi amado Mis manos destilaron mirra y mis dedos mirra exquisita en el pestillo de la cerradura (5 3-5)

Nos ocurre lo mismo con San Juan de la Cruz en su insuperable poema laquoLlama de amor vivaraquo

iexclOh cauterio suaveiexclOh regalada llagaiexclOh mano blanda iexclOh toque delicadoque a vida eterna sabey toda deuda pagaMatando muerte en vida la has trocado

172 JUAN FRANCISCO MAURA

miacutesticos San Juan de la Cruz Esta tradicioacuten se extiende hasta finales del siglo XVII esto es hasta los finales del Barroco siendo un poco maacutes tardiacuteo en la Ameacuterica espantildeola Sin tener como propoacutesito discutir en el presente trabajo a queacute corriente miacutestica pertenece la obra de Sor Nada es necesario resaltar no obstante el hecho de que estaacute escrito por una mujer y ademaacutes de tierna edad El manuscrito 12959 Caja 26 termina con estas pa-labras laquo[T]odas estas boverias escrivi por entretenimiento siendo resien profesa en la religion Sor Nadaraquo Mas no por la juventud de su autora los escritos dejan de tener lo-gradas metaacuteforas imaacutegenes y siacutembolos sacados de la naturaleza La alegoriacutea de la unioacuten matrimonial poseeacute el fuego liacuterico de la maacutes apasionada de las relaciones amorosas vivi-ficada por perfumes flores insectos animales escarchas nieves o abrojos Por lo tanto aunque la narracioacuten destile cierta ingenuidad no carece por ello de un vocabulario rico con el sabor popular de la poesiacutea de los cancioneros y romances de tradicioacuten renacen-tista No ha sido otra mi intencioacuten que la de rescatar del olvido unos escritos en prosa y en verso llenos de frescura y espontaneidad que nos muestran la pasioacuten con que la joven novicia se laquoentrega en cuerpo y almaraquo a los menesteres de su profesioacuten guiada por un padre espiritual en esos primeros antildeos de formacioacuten Esta ha sido la razoacuten por la que presento a continuacioacuten el citado manuscrito en su totalidad

Sor Nada (Mss 1295928)

laquoEsplicacion sobre en que consiste la paz del AlmaraquolaquoQuartillas a un Alma que padece soledad interiorraquo

[7 hojas utiles en 4ordm letra del siglo XVII]

+

Esplicacion sobre en que consiste la paz del Alma

Pareseme segun mi rudo entender que la verdadera paz del Alma con-siste en una muy pura y buena consiencia en un corason liso y bien intensionado en una verdadera rectitud de espiritu en el qual el Alma procura bolar a Dios sin jamas detenerse a respetos umanos ni reparar en que me diran ni de que me censuraran sino me apresuro a seguir a unos entenderes y pareseres dorados en los quales pretende el mundo engantildear y ensuciar si se puede la puresa de un corason unicamente de Dios y de su Santa ley y se lo conserva cristalino con la divina asis-tencia de la gracia y comprendido de su Amor y temor siguiendo la luz divina de tan amante Sentildeor Dios y ombre verdadero con que este ilustrado corason ni se altera ni se mueve por los disfrasses dorados que ase el mundo y sus moradores mayormente con falssas amistades aunque con ellos muestre buena intension Con la misma grasia y luz de Dios conose el buen corason estos disfrasses que le ase el mundo y se retira de todo con espiritu y valor esto sin la menor alterasion sino que en suma paz se retira a buscar a Dios dentro de su mismo corason

173ESPANtildeOLAS DE ULTRAMAR EN LA HISTORIA Y EN LA LITERATURA

y se abrasa con su pura verdad en la qual se le descubren mil interio-res secretos tan solidos puros y verdaderos que la misma Alma queda abismada y de puro grandes no los puede bien comprender ni esplicar pero estos mismos secretos divinos le sirven de espuelas para no solo correr sino bolar con pies de plumas en seguimiento de su bien ama-do Jesus y como este soberano Sentildeor es tan amante de sus espossas las Almas luego que la ve bolar con pies de plumas la sale al encuen-tro en despoblado campo que se deve de llamar Campo de Amor de Dios y el mismo Sentildeor se viene a las manos por ser Dios que nos ama con Amor infinito de Padre benigno y amoroso con que asiendose en contra deso este divino enamorado en lo interyor de el Alma que le busca con ansias de servirle y amarle y en aquella soledad traban una conversasion amorosa y sensilla como la pluma simple de quien esto escrive

Divino enquentroDios y el Alma en la soledad

O Soberano Principe de la paz dise el Alma tus perfumes me traen a ti bolando porque alla en el mundo y sus valedores me pretendian engantildear y entretenerme con pegaminossas amistades que facilmen-te me pudieran envenenar y matarme apartandome de ti Mi dulse Jesus amable mi Redentor Soberano que con tantas ansias me sales al enquentro como siervo [ciervo] erido de mis Amores los quales tu Amor me ofrese para que con tu mismo Amor te ame y te sirva en paz sin perturbarme ni contristarme ni cansarme de padeser pasando si se ofrese por escarchas nieves espinas ni abrojos ni por otros diverssos trabajos ni piedras de contradision que tu me puedes permitir pues por mas que el mar se levante con sus ferosses olas contra mi ni piedras se me tiren al rostro en todo Sentildeor me quieres con serenidad pasifica sin la menor perturbasion Todo Sentildeor quieres que lo tome con Serenidad de espiritu y asi vengo a ti bolando para que mejor me ensentildees a vivir segun las leyes de tu noble condision que me son muy agradables por mas que el mundo me las despresie por segir sus vanidades y torsidas intensiones con apariensias de bien y con este engantildeo y bien me quie-ro mas a mi que no a mi proximo veo que segun mi pareser se pierden muchas Almas y tambien de aquellos que se depresian y pasan por muy espirituales Con que me paresen pocos los que llegan a padeser con desnudes151 de espiritu por tu purisimo Amor y me parese essas se quedan muy atrasadas en la virtud por el peligro de bolver muy atras el paso de modo que se pueden despentildear y pereser en su misma desgra-sia ya por soberbia o por otras enfermedades que se les pega al corason y asi lo pasan como siegos ignorantes sin advertir en sus peligros

151 La letra en cursiva es miacutea

174 JUAN FRANCISCO MAURA

este aquerdo Sentildeor y otros que tu verdad me ensentildea me ase venir uyendo de las paredes del mundo y me vengo a ti Dios mio bolando con las dos Alas del Amor y temor que tu mismo Amor me ofrese tan de gracia y tan de grado que no se duentildeo mio con que lo responder a tan soberano beneficio y finesa de tus entrantildeas de Amorvengo Sentildeor y esposo mio unicamente a descansar en ti pues los peli-gros del camino me an puesto en mucho sobresalto temiendo el per-derte y sin ti perderme para siempre por una eternidad sin fin pues deseo amado mio ganarme ganandote a ti y vivir en ti aora en vida y despues eternamente y estos cuidados me traen fatigada molida y cansada y no podre tener alivio y descanso sino viendome entre tus brassos aunque sea estando en cruz pues ese es el fin de mis deseos vivir y morir en ti ablame mi cordero manso y ensentildeame a que ver-daderamente te ame como fiel esposa ea mi caro amigo dame la ma-no pues sabes Amor mio que en mi no ay mano sin tu misma mano y asi mi Dios y Sentildeor mi Principe Soberano con umilde rendimiento y deseos de alcansarte te suplico me des la mano y me consueles en estos mis trabajos Deseo Sentildeor vivir en paz y los malos amores de mi Naturaleza flaca no me dejan detentar y no quieren por mi desgrasia atropellar con las leyes de tu Amor ni quisiera perturbar mi corason quando me veo con un torvellino de olas y contratiempos que a menu-do me suelen sercar pero si tu Sentildeor me das la mano nada temo sino que me aseguro y vivire en paz sin que me fatiguen los contratiempos pues mi mano en la tuya y mi espiritu en el tuyo por mas borrascas que me envistan no seran bastantes para rendir mi voluntad a la suya bien si para pronunsiar un fiat que resuene bien atras en tus oidos y que en medio de mis fatigas me ponga a cantar tus divinas misericor-dias hea Sentildeor ya pretendo serrar mis labios por no desir mas bove-rias y deseo Sentildeor oir tus palabras de vida eterna abla Sentildeor que tu sierva oye con atension y cuydado mira mi Dios que se me ase tarde y espero con prisa deseando saborearme y aprovecharme de los ecos de tu Santa dotrina pues todas tus palabras saben a eterna vida callen pues mis sentidos y potensias y todo se ponga en paz pues mi dulse y soberano Sentildeor no se escusara de ablar me aun que en mudo silensio hea mi gran Prinsipe de la paz ablame que tus puros amores me traen perdida por estos asperos montes y mis cortos pasos no te pueden dar alcanse mirame mi Dios a tus pies postrada como un vil gusano y me-nor ormiga de la tierraabla Jesus y dise a su esposa el Alma querida esposa mia que me pides y por que te muestras tan fatigada y mal sufrida no vives como corde-rita del campo buscando de mis pechos el sustancial pasto mi Amor no te sustenta y mi grasia te promete eterna vida pues dime amada de que te fatigas y te muestras mal sufrida mira que te amo con Amor de padre y con Amor de esposo el mas fino y puro enamorado que no tan solo me presio de darte mi mano sino tambien todo mi cuerpo y

175ESPANtildeOLAS DE ULTRAMAR EN LA HISTORIA Y EN LA LITERATURA

sangre para que con mi pan de vida te sustentes y te regales a tus an-churas y que con mi propio espiritu vivas en paz como tu lo deseas y que mis amores sean unico alivio en tus trabajos en esta mortal vida pues si esto es asi y sabes que muero por darte vida dime esposa mia de que te fatigas Dame querida tus brassos y dime si me amas como yo te amoResponde el Alma152 Tu mi Dios sabes si yo te amo pues de mi solo se que mis deseos y ansias buelan a ti mas no alcanso a saber si te amo como tu de-seas ser amado y como desconfio tanto de mi y de mis prosederes falssos temo Dios mio perderme y perderte y asi Sentildeor pues no desechas mis Amores y te muestras tan fino en amarme te pido me ensentildees a vivir segun las leyes de tu pura verdad y fina condisionhija mia dise Dios la prueva de un verdadero Amor consiste en sufrir callar y padeser por mi unico Amor y en todo seguir mis pasos sin ja-mas retroseder por mas fragoso que se muestre el camino pues nunca seran tantas las espinas las escarchas ni las nieves ni los vientos bo-rrascosos que te se ofrescan pasar por mi Amor como los que mi tierno y desinteresado Amor paso por ti y siempre con mis pies descalssos y asi hija y esposa mia muestrate costante en seguir lo perfecto de mis passos pues mi braso fuerte sera en ti y peleara por ti y te sera el todo en tus nesesidades y mi Amor te convertira en dulse y suave lo amargo y molesto a la condision de la carrne

Responde el Alma

O mi enamorado Jesus O mi dulse y tierno amanteO alegria de los sielos O dulse Jesus amable

(Toda Sentildeor me derrito toda Sentildeor me desagoy quiero vivir por ti ea sentildeor abrasadme) [Tachado en el original]

Toda Sentildeor me derrito toda Sentildeor me desagoy quiero morir por vos ea Sentildeor que ya acabo

Ya tus amores me llaman ya tus perfumes me traencon suspiros y agonias Sentildeor asta que te alcanse

O mi Jesus amoroso no puedo mas dilatarmeya la pasiensia me falta dulse Jesus abrasadme

(No puedo vivir sin vos no puedo mas dilatarmeya la pasiensia me falta dulse) [Tachado en el original]

No puedo vivir sin vos mi dulse Jesus amablepues me teneis echisada siendo mi esposo y mi Padre

152 La aparicioacuten de una mayuacutescula al principio de una oracioacuten es algo totalmente arbitrario en este ma-nuscrito dada la libertad ortograacutefica de la autora Como se puede observar en la mayor parte de las veces no es el caso

176 JUAN FRANCISCO MAURA

Ay que me abraso Ay que me quemo del Amor deJesus nasareno como no tocan y tantildeen a fuego

Responde Jesus Hija mia tus simples vozes oygo y aunque resuenan bien a mis oidos pero te deseo mas mansa y pasifica en tus fervores ya sabes que no siempre as de vivir en mantillas ni a los pechos de tu Madre por que es rason que padescas con espiritu fuerte como mu-jer valerosa por que a una esposa del Rey soberano y prinsipe de la paz no le estan bien chiquerias ni fervores de nintildea malcriada y ya es ora que la destete su Madre la Naturaleza y que empesando su nueva vida camine con el favor de mi grasia sigiendo mis passos de eterna vida esto con sus pies descalssos segun mis leyes de Amor puro y desinteresado lo tienen ordenado153 y vivir en paz como lo deje en-cargado a mis apostoles Santos repitiendoles varias vezes Vivir en pas y caridad esto es un vivir en Dios y Dios en el Alma y asi hija mia el Alma que vive en paz vive en mi Como mis cortesanos en el cielo y pues me pides que te ensentildee a vivir segun las leyes de mi condision Repito el desir que te debes mostrar sufrida en todo tiempo y estado sin permitir en tu corason que ni aun los fervores se adelanten con estremos ni ademanes sino atiende y aprende de mi purisima Madre pues siempre la veras si bien lo consideras que mientras vivio en el mundo en todos sus trabajos se mostro firme fuerte costante como piedra diamante Pues mirandome nintildeo entre sus brasos desnudo en el pesebre desnudo y crusificado en los brassos de una cruz En estos y otros passos no se mudo su rostro sino que en suma serenidad y pasifico corason toda se sacrificaba enteramente en los brassos de mi Amor y rendido su corason y voluntad en la de mi eterno Padre por ejemplo te la doy y deseo que aprendas de sus nobles calidades pues te aseguro carisima que las leyes de mi condision y pura verdad todo lo allaras enserrado en el corason de mi purisima Madre sedle fiel y descansaras en paz

+

Quartillas a un alma que padese soledad interior

1Un Alma afligida y tristese ve en un campo desiertay en el su esposo la tieneAtormentada y sedienta

153 Es a traveacutes de estas liacuteneas lo que hace suponer que la autora de este diaacutelogo amoroso entre el Alma y Je-suacutes es novicia esto es laquoque estaacute empesando su nueva vidaraquo En las mismas liacuteneas una vez maacutes se hace alusioacuten al laquodesteteraquo de su vida civil laquoa una esposa del Rey soberano y principe de la paz no le estan bien chiquerias ni fervores de nintildea malcriada y ya es ora que la destete su Madre la naturalesaraquo (fol 5)

177ESPANtildeOLAS DE ULTRAMAR EN LA HISTORIA Y EN LA LITERATURA

2Pendiente se ve en el AyreSolo un hilo la sustentasin tocar el pie en el sueloporque del no tome tierra

3Mirandola esta yto a ytoaquel sol que la atraviesay la enviste con sus rayosmas ella no pestantildeea

4Como sigarra padese y como a tal se atormentabatiendo sus mismas Alasy el corason se atraviesa

5Con penas sustos temoresquando se mira assi mesmasin tener valor en nadaporque es la misma flaquesa

6Pero el Amor de su esposotoda su atension le llevay la pone en un abismopero cubierto en tiniebla

7Desea dar algun bueloy subir con ligeresapero se mira travadacon una fuerte cadena

8Clama suspira y padeseMas del todo se sujetaRindiendo su voluntadA la divina clemencia

9Los enemigos del AlmaCruelmente le asen guerray ella aunque firme y constantelos reselos la atormentan

178 JUAN FRANCISCO MAURA

10de todos modos padeseaunque gosa la asistensiadel divino esposo amadoque en su interior se recrea

11Solo de verla penary con verla tan serenadise resibe mil gustosde su sigarra pequentildea

12Le sabe el mundo a mil yelesy su trato le atormentaviendo en el mil falsedadesque todas saben a tierra

13Para poderse librardeja de correr y buelacon las Alas del Amory el mismo Amor se la lleva

Una vida dedicada a un amor divino un amor que le haraacute llenar un buen nuacutemero de cuartillas dedicadas a tan alta empresa Se desconoce si la vocacioacuten de Sor Nada con-tinuoacute con tanta intensidad el resto de sus diacuteas Ciertamente la vida en el covento no era faacutecil En algunos casos la experiencia era traumaacutetica incluso fatal para algunas de las adolescentes de la Ameacuterica Espantildeola Las reglas del claustro eran severas por varias razones Estas joacutevenes si no teniacutean el permiso de la superiora no podiacutean recibir visitas no podiacutean volver a sus casas su correspondencia era censuraba y no podiacutean salir del periacutemetro conventual Igualmente se levantaban antes del amanecer para oir misa tra-bajaban el resto del diacutea y lo maacutes interesante es que muchas veces esta vida era aceptada por muchas

Page 4: Tercera parte: Mujeres en la vida intelectual - …parnaseo.uv.es/Editorial/Maura/TerceraParte.pdf · La Biblia, por su parte, hace repetidas menciones de la mujer y sobre el comporta-

134 JUAN FRANCISCO MAURA

la misma forma que se habiacutea venido haciendo secularmente en tierras peninsularesAristoacuteteles en su Poliacutetica obra traducida al latiacuten en el siglo XIII por Santo Tomaacutes de

Aquino hace mencioacuten de la mujer junto con los esclavos y de la idea que de eacutestas te-niacutean los laquono griegosraquo

1252a34 Nature then has distinguished between female and slave she recognizes different functions and lavishly provides different tools not an all purpose tool like the Delphic knife for every instrument will be made best if it serves not many purposes but one But non-Greeks as-sign to female and slave exactly the same status (57 lib1 cap 2)

La Biblia por su parte hace repetidas menciones de la mujer y sobre el comporta-miento que eacutesta debe seguir en la sociedad de sus obligaciones y derechos para con su marido y demaacutes menesteres de tipo socioloacutegico que tienen como base comuacuten la familia en su calidad de centro de la sociedad judeo-cristiana El tono general sobre la mujer variacutea seguacuten los diferentes libros biacuteblicos Como norma se suele presentar un tono de subordinacioacuten al marido y en algunos casos de absoluto desprecio principalmente en el Antiguo Testamento Sirva de ejemplo este pasaje de Ester laquoTuacute lo sabes todo y sa-bes por lo tanto coacutemo aborrezco la gloria de los inicuos y detesto el lecho de los incir-cuncisos y de todos los extrantildeos Tuacute conoces que soacutelo por necesidad estoy donde estoy que detesto las sentildeales de mi gloria que llevo sobre la cabeza en los diacuteas de mi puacuteblica presentacioacuten que las abomino como pantildeo de menstruacioacutenraquo (Ester 14 15-17)

En el laquoDeuteronomioraquo aparece otro singular ejemplo del papel de la mujer en situa-ciones tan comunes como una pelea entre dos hombres Si bien en este caso la mujer en cuestioacuten es capaz de coger de los genitales al enemigo de su marido durante la con-tienda el castigo que se solicita para la mujer es desproporcionado e inhumano laquoiexclSi mientras rintildeen dos hombres uno con otro la mujer del uno interviniendo para librar a su marido de las manos del que le golpea agaacuterrase a eacuteste por las partes vergonzosas le cortaraacutes las manos sin piedadraquo (Deuteronomio 25 11-13)

En los proverbios se cita un ejemplo maacutes ilustrativo auacuten de la capacidad de la mujer laquolascivaraquo de atraerse con todo tipo de insinuaciones amorosas la atencioacuten de un laquopobreraquo marido ingenuo e indefenso ante tan manifiestas provocaciones Resulta interesante observar sobre todo coacutemo se presenta a la mujer a modo de una serpiente que encanta con sus provocaciones y su astucia a una viacutectima indefensa laquosimple y falto de juicioraquo

Era el atardecer cuando yaobscureciacutea al hacerse de nocheen la tinieblaY he aquiacute que le sale al en-cuentro una mujer con ataviacuteo deramera y astuto corazoacutenEra parlanchina y procaz ysus pies no sabiacutean estarse en casaahora en la calle ahora en la plaza acechando por todas las esquinasAgarrole y le besoacute y le dijo

135ESPANtildeOLAS DE ULTRAMAR EN LA HISTORIA Y EN LA LITERATURA

con toda desverguumlenzaTeniacutea que ofrecer un sacri-ficio y hoy he cumplido ya mis votosPor eso te he salido al encuentro iba en busca de ti y aho-ra te halloHe ataviado el lecho con ta-pices con telas de hilo recamadode EgiptoHe perfumado mi caacutemaracon mirra aacuteloe y cinaacutemonoVen embriageacutemonos deamores hasta la mantildeana harteacute- monos de cariciasPues mi marido no estaacute encasa ha salido para un largoviajeSe ha llevado la bolsa y no volveraacute hasta el plenilunioCon la suavidad de sus pala-bras le rindioacute y con sus halagos le sedujoY se fue tras ella entonteci-do como buey que se lleva almatadero como ciervo cogido enel lazoHasta que una flecha le atra-viesa el hiacutegado o como paacutejaro que se precipita en la red sin saber que le va en ello la vida (Proverbios 7 9-24)

El laquopobre paacutejaroraquo cayoacute en la red hipnotizado por la serpiente Desde el laquoGeacutenesisraquo hasta laquoMalaquiacuteasraquo esto es desde el principio al fin del Antiguo Testamento se puede apreciar en menor o mayor grado la misoginia cararacteriacutestica de una sociedad pa-triarcal Seriacutea prolijo citar todos aquellos pasajes donde esto se confirma siendo tal vez los siguientes algunos de los maacutes representativos laquoEl varoacuten no debe cubrir la cabeza porque es imagen y gloria de Dios mas la mujer es gloria del varoacuten pues no procede el varoacuten de la mujer sino la mujer del varoacuten ni fue creado el varoacuten para la mujer sino la mujer para el varoacutenraquo (Corintios 11 7-10) El proacuteximo fragmento hace referencia a la laquomujer disolutaraquo Para que te guarden de la mala mujer de los alagos de la mujer ajena No codicies su hermosura en tu corazoacuten no te dejes seducir por sus miradas Porque si la prostituta busca un pedazo de pan la casada va a la caza de una vida preciosa iquestPuede llevar uno fuego en su regazo sin quemarse los vestidos (Proverbios 6 24-28)

136 JUAN FRANCISCO MAURA

No es difiacutecil imaginar la repercusioacuten de esta argumentacioacuten si se hace de ella una inter-pretacioacuten literal sobre todo ante un pueblo de mayoriacutea analfabeta o poco instruida

Claro estaacute que seriacutea absurdo querer hacer un anaacutelisis literal de las palabras de las laquoSa-gradas Escriturasraquo Sin embargo eacutestas han influido e influyen en la sociedad occidental a un nivel maacutes elevado de lo que comuacutenmente se piensa a veces de manera incons-ciente De cualquier manera sin entrar en una comparacioacuten teoloacutegica entre el Yaveacute del Antiguo Testamento y Jesucristo en el Nuevo Testamento la diferencia que se hace del elemento femenino entre estos dos libros es laquonotableraquo Dice Yaveacute a Sauacutel laquoNo perdones mata a hombres mujeres y nintildeos aun los de pecho bueyes y ovejas camellos y asnosraquo Forma de pensar eacutesta que no concuerda con el laquoamor al proacutejimoraquo del Nuevo Testamen-to donde la venganza y el odio pasan a ser amor y resignacioacuten

En la Edad Media espantildeola existieron algunas leyes que teniendo como objeto a la mujer dejan entrever el derecho y las limitaciones con que eacutestas contaban en caso de abuso por parte de los hombres Un ejemplo de estos derechos o laquofuerosraquo podiacutean ser muy bien los de Jaca otorgados en el antildeo de 1077 por el rey Sancho Ramiacuterez Estos fueros en opinioacuten de Antonio Ubieto Arteta laquose extendieron a muchas poblaciones de Espantildearaquo Veacuteanse las siguientes claacuteusulas laquoK) Si alguien faltase con mujer con el consen-timiento de ella no siendo casada no pagariacutea multa pero si usase violencia deberiacutea tomarla por esposa o proporcionarle marido L) La mujer ultrajada deberaacute pedir justicia en los dos primeros diacuteas inmediatos a su deshonra presentando testigos Si pasan los tres primeros diacuteas sin reclamar ya no tendraacute derecho (Ubieto 135-36)

Observar el desarrollo que fue teniendo el papel de la mujer dentro de la sociedad especialmente de la espantildeola resulta sin duda interesante desde un punto de vista so-cioloacutegico Gracias a ello podremos comprender mucho mejor el posterior desarrollo de su participacioacuten en los acontecimientos de la eacutepoca que las tocoacute vivir y su posterior proyeccioacuten en el Nuevo Mundo siempre teniendo en cuenta el margen maacutes o menos estrecho que la Iglesia Catoacutelica y la mentalidad de la eacutepoca impusieron en mayor o menor grado a lo largo de diferentes periacuteodos Es por eso por lo que debemos indagar maacutes profundamente en todo lo relacionado con la actuacioacuten de la mujer en tierras de ultramar y sobre todo valorar sus acciones no como hechos marginales y esporaacutedicos sino como la base y los cimientos de una sociedad que todaviacutea sigue viva Son las voces de estas mujeres aquellas que se han podido rescatar el mejor testimonio Fueron las madres de los espantildeoles del siglo XVI dice Fernaacutendez Duro las que hicieron posible que en tan corto nuacutemero de antildeos se hiciese un derroche tan formidable de energiacutea en todos los mares y continentes de nuestro planeta

iexclQueacute grandeza queacute arrojo el de Espantildea en el siglo XVI Jamaacutes vio el Mundo energiacutea actividad y fortuna semejantes Para los espantildeoles no habiacutea obstaacuteculos en los riacuteos en las montantildeas ni en los desiertos Jun-taacutebanse unos cuantos creaban escuadras conquistaban imperios y fundando ciudades discurriacutean el modo de unir los mares y los climas Diriacutease que eran de procedencia de gigantes o de semidioses Eraneran hijos de tales madres (Duro 26)

Garcilaso de la Vega El Inca (1536-1616) cronista peruano hijo de un capitaacuten espantildeol y de una princesa inca tambieacuten se hace eco en su obra Historia general del Peruacute (segunda parte de sus Comentarios Reales) de la opinioacuten de algunas sentildeoritas que pasaron al Nuevo

137ESPANtildeOLAS DE ULTRAMAR EN LA HISTORIA Y EN LA LITERATURA

Mundo con la idea de encontrar al hombre de sus suentildeos en este caso al conquistador llevaacutendose una gran sorpresa al comprobar coacutemo las heridas las inclemencias del tiem-po y las enfermedades habiacutean dejado sus huellas en los rostros de estos hombres que no eran como se los imaginaban Este fue el comentario de una de las doncellas casade-ras que llevoacute don Pedro de Alvarado a Guatemala

iquestDicen que nos hemos de casar con estos conquistadores dixo una dixo otra iquestcon estos viejos podridos nos habiacuteamos de casar caacutesese quien quisiere que yo por cierto no pienso casar con ninguno dellos dolos al diablo parece que escaparon del infierno seguacuten estaacuten de estro-peados Unos cojos otros mancos otros sin orejas otros con un ojo otros con media cara y el mejor librado la tiene una dos y tres vecesraquo Dijo la primera laquoNo hemos de casar con ellos por su gentileza sino por heredar los indios que tienen que seguacuten estaacuten de viejos y cansados se han de morir presto y entonces podremos escoger el mozo que qui-sieacuteremos en lugar del viejo como suelen trocar una caldera vieja y rota por otra sana y nueva (Garcilaso vol 2 lib 2 cap 1 80)

Al escuchar estas palabras un caballero que se encontraba al otro lado de la cortina donde estaban hablando no pudieacutendolo sufrir maacutes las afrentoacute pasando luego a decir-les a los caballeros los laquobuenos deseosraquo de las damas Se marchoacute a su casa llamoacute a un cura y se casoacute con una india con la que ya teniacutea dos hijos a los que legitimoacute para que no pasasen a ser esclavos o criados de ninguna de esas sentildeoras (Garcilaso vol 2 lib 2 cap 1 81)

Muchas de estas primeras mujeres pasaron a ser viudas varias veces a causa precisa-mente de la muerte del marido en las diferentes campantildeas de los primeros antildeos

Fueron las descendientes de las mujeres que vinieron con los conquistadores las que de una manera definitiva asentaron las raiacuteces de una nueva sociedad que llegariacutea al mismo esplendor y refinamiento que la de la metroacutepoli El trasplante ya estaba realiza-do La violencia del laquoencuentroraquo de los primeros antildeos habiacutea dado como fruto una nueva sociedad que habiacutea heredado las bases de la cultura espantildeola y que teniacutea ademaacutes todo el encanto y riqueza de las variadiacutesimas culturas precolombinas

La primera generacioacuten corresponde ya a la mujer criolla hija de pobla-dora aquella que educoacute a los hijos propios y a los ajenos suavizando las costumbres baacuterbaras de la eacutepoca belicista Lo cierto es que a pesar de todas las vicisitudes la mujer hizo posible la creacioacuten del hogar en el que se fraguoacute la transculturacioacuten la sociedad gracias a su presencia fue perdiendo vulgaridad hasta alcanzar un notorio refinamiento Aun-que la paz tardoacute en llegar las treguas favorecieron el asiento en villas y ciudades En ellas florecioacute el romancero y la copla medieval junto a la arquitectura goacutetica el balcoacuten canario y el patio andaluz (Borges 436)

Ya fuese en la ciudad de Meacutexico o en la de Lima la mujer criolla gustaba de todas aquellas sofisticaciones que podiacutean disfrutar las mujeres de Sevilla o de la corte To-das teniacutean ademaacutes criados A mediados del siglo XVI empezaraacuten las navegaciones en-tre Meacutejico y las Filipinas lo que contribuiraacute a enriquecer los atuendos de las mujeres criollas asiacute como espantildeolas con artiacuteculos tan exoacuteticos en su diacutea pero tan castizos hoy

138 JUAN FRANCISCO MAURA

como el mantoacuten de Manila o el abanico Fray Reginal de Lizaacuterraga dice sobre las mu-jeres del Peruacute

La criolla es ademaacutes mujer que gusta de la ostentacioacuten y del lujo vi-cios muy femeninos que en parte la compensaban de pasadas o futu-ras calamidades En el Peruacute el vestuario se hizo tan ostentoso laquoque casi no se sabe coacutemo lo pueden sufrir los maridosraquo La soberbia de ellas es demasiada y no sabemos en lo que ha de parar no creo que hay en lo descubierto del mundo ciudad en su tanto ni cuatro veces mayor que a tanta soberbia en este particular como esta nuestra ciudad llegueCon justo tiacutetulo se podriacutea moderar por los virreyes esta soberbia Pe-ro no seacute por queacute no se modera y siacute seacute por queacute ni los maridos tienen aacutenimo para moderarlo ni los gobernadores tampoco (Lizaacuterraga 38 lib 1 cap 51)

La mujer criolla participa en todos los aconteceres de su sociedad Estaacute presente en todos los acontecimientos sociales y con frecuencia econoacutemicos sin dejar por ello de controlar la vida del hogar Al igual que en Espantildea ellas se encargaraacuten de casar a sus hijas e hijos unos destinados a mantener la tradicioacuten familiar y enriquecerla otros a engrosar las filas de la iglesia

Mujeres en la vida intelectual espantildeola durante los siglos XVI y XVII131

Great genuine and extraordinary work can be done only in so far as its author disregard the method the thoughts the opinions of his contemporaries and quietly works on in spite of their criticism on his side despising what they praise No one becomes great without arrogance of this sort (Shopenhauer The Art of Literature)

De igual manera que se ha querido excluir a la mujer de las primeras paacuteginas del encuentro con el Nuevo Mundo otro tanto ha ocurrido con la labor intelectual de tan insignes mujeres Muchas pese a lo remoto de sus asentamientos lograron dar a luz los maacutes valiosos frutos de la poesiacutea liacuterica de su tiempo132 Un gran nuacutemero de estas mujeres dada la estratificacioacuten social de su eacutepoca desarrolloacute su labor en conventos Otras sin embargo hicieron lo mismo compaginando sus vidas matrimoniales con las tareas culturales La vida monacal daba ventaja en cierta forma a la hora de conseguir la independencia deseada para dedicarse por completo al mundo de las letras sin que un

131 Veacutease mi artiacuteculo laquoCara y cruz de la mujer hispana imaacutegenes del siglo XVIraquo132 Veacutease el ejemplo de Mariacutea de Alvarado la Amarilis de Lope de Vega que escribioacute su obra en los maacutes

apartados rincones de los Andes peruanos Veacutease Meneacutendez y Pelayo Marcelino Historia de la Poesiacutea Hispano-Americana 84

139ESPANtildeOLAS DE ULTRAMAR EN LA HISTORIA Y EN LA LITERATURA

marido o unos hijos se interpusiesen en el tiempo concentracioacuten y dedicacioacuten que una actividad artiacutestica requiere Pese a todo no siempre fue asiacute El maacutes conocido ejemplo lo tendriacuteamos en Sor Juana Ineacutes de la Cruz la cual tuvo que sufrir problemas con algunos altos cargos eclesiaacutesticos asiacute como envidias de propios y extrantildeos por ser entre otras cosas superior en inteligencia y cultura a la mayor parte de sus contemporaacuteneos

Muchos conventos estaban bien provistos de libros a menudo donados por aquellas familias que teniacutean alguacuten miembro dentro del convento o simplemente por simpati-zantes de las diferentes oacuterdenes religiosas En la paz del claustro algunas de estas mu-jeres llegaron a adquirir un formidable desarrollo intelectual Pero a pesar de la calidad del material que existe sobre tan insignes mujeres se las ha preferido mantener en la oscuridad Como deciacutea con ironiacutea el pensador espantildeol Benito Feijoacuteo (1676-1764) sobre las disputas entre hombres y mujeres laquoLo cierto es que ni ellas ni nosotros podemos en este pleito ser jueces porque somos partes y asiacute se habiacutea de fiar la sentencia a los aacutengeles que como no tienen sexo son indiferentesraquo (46)

El escritor argentino Vicente G Quesada ya se quejaba a principios del presente si-glo de la pobriacutesima informacioacuten que ofreciacutea la enciclopedia francesa Larousse sobre la vida colonial en Meacutexico cuando refirieacutendose a eacutesta deciacutea lo siguiente laquoLos uacutenicos libros que se conociacutean eran el almanaque el catecismo del P Ripalda el Antildeo cristiano la vida de los santos y otros de ese geacuteneroraquo (Quesada 125) El mismo autor refutando lo anterior escribe

Por uacuteltimo recordareacute la notabiliacutesima publicacioacuten moderna La Bibliogra-fiacutea mejicana del siglo XVI eruditiacutesima y que constituye el maacutes concluyen-te testimonio para desautorizar la ligereza del Dictionnaire de Larousse que afirma lo que ignoraEl celebrado escritor mejicano don Francisco Pimentel ha publicado su erudita obra Historia criacutetica de la literatura y las ciencias en Meacutejico desde la conquista hasta nuestros diacuteas es un trabajo que comprende cuatro partes divididas asiacute Novelistas oradores historiadores y autores cientiacuteficos Por esta breve relacioacuten se comprende que es temeridad indisculpable pretender dar noticias del movimiento intelectual en el virreinato de Meacutejico sin conocer las obras de Pimentel y de Garciacutea Icaz-balceta ni la edicioacuten primitiva o corregida de Beristain (126)

En los maacutes importantes nuacutecleos urbanos de Meacutexico y Peruacute se podiacutea apreciar clara-mente la participacioacuten directa de la mujer en las maacutes diversas actividades sociales y cul-turales Esta participacioacuten llegoacute incluso al extremo de algunas mujeres que insultaron li-teralmente a las autoridades competentes cuando lo creyeron necesario laquoEstas mujeres que lloran seriacutean las mismas que creyeron como causa principal de aquellas muertes las disposiciones de las Leyes Nuevas porque no tuvieron empacho de insultar al virrey Blasco Nuacutentildeez Vela a quien lsquodieron gritasrsquo (sic) las espantildeolas y lo maldijeron como si llevara consigo la ira de Diosraquo (Borges 52) Lo mismo ocurre en la peniacutensula Dentro del plano cultural durante la primera mitad del siglo XVII destacaraacute entre los escritores de su tiempo Mariacutea de Zayas y Sotomayor gran novelista y defensora de los atributos de su sexo cuya obra narrativa y dramaacutetica disfrutoacute de una gran popularidad en la peniacuten-sula asiacute como en Hispano-Ameacuterica laquoCasi no ha habido novelista maacutes simpaacutetico a los lectores espantildeoles que Dontildea Mariacutea de Zayas seguacuten las muchas reimpresiones que se han hecho de sus obrasraquo (E Fernaacutendez de Navarrete xcvii) Entre sus admiradores contoacute

140 JUAN FRANCISCO MAURA

con el infatigable y genial Lope de Vega que la elogioacute en su obra El laurel de Apolo laquoNo desaprovechoacute Dontildea Mariacutea ninguna ocasioacuten de abogar por las mujeres contra la tiraniacutea de los hombres suponiendo que como deacutespotas las quieren ignorantes para tenerlas sujetasraquo (E Fernaacutendez de Navarrete xcvi)

Pero no tiene que ser exclusivamente una mujer la que defienda los atributos y los derechos de su sexo Se podriacutean citar varios ejemplos donde desde los inicios de las letras espantildeolas la mujer aparece comprendida e incluso defendida por escritores con-temporaacuteneos Veacuteanse los siguientes versos escritos en el siglo XIV por el genial Arcipres-te de Hita

Mujeres abrid los oiacutedos y escuchad una buena leccioacuten escuchad estas palabras guardaos del varoacuteniexclGuardaos no os acaezca como el leoacutenal asno sin orejas y sin su corazoacuten(892)133

No se puede despreciar la influencia que tuvo en la Espantildea del siglo XVI Erasmo de Roacutetterdam el intelectual maacutes reputado de su tiempo Erasmo con una clarividencia mental poco comuacuten trata de los temas maacutes cotidianos asiacute como de los maacutes profun-dos Sus escritos siempre al borde de lo hereacutetico dejaron bien claro su independencia ideoloacutegica Tambieacuten supo dar su opinioacuten sobre las mujeres y de la importancia que una buena educacioacuten supondriacutea a la hora de llevar a cabo las tareas diarias

With regard to female education Erasmus is unequivocal In Abbatis et eruditae he categorically states that education and learning are as desirable in a woman as in a man And although there is naturally no suggestion that the education and learning should be directed towards a career there are no carping restrictions as to what the education should consist of or where the learning should end (McKendrick 9)

Fue una mujer en particular la que llamoacute la atencioacuten del erudito holandeacutes Catalina de Aragoacuten hija de Isabel la Catoacutelica Grandes debieron ser las virtudes de esta dama cuando tan renombrados laquolibrepensadoresraquo la calificaban como laquomilagro del aprendi-zaje femeninoraquo

At the centre of the movement was a Spanish woman Catherine of Aragon first wife of Henry VIII of England Her mother Isabel la Catoacutelica had made sure that Catherine and her sisters received an advanced and enlightened education under two eminent Italian hu-manists Antonio and Alessandro Geraldini and Catherine herself was considered by Erasmus and Sir Thomas Moore to be a miracle of fe-male learning At her request Juan Luis Vives between 1524 and 1528 wrote his De institutione feminae christianae for her daughter Mary and he dedicated it to Catherine (McKendrick 6)

La pobre Catalina ya presagiaba su triste final Existe una dramaacutetica y muy poco co-nocida carta conservada en la Academia de la Historia donde eacutesta escribe a su sobrino el emperador Carlos V pidieacutendole ayuda y proteccioacuten a su desesperada situacioacuten en Inglaterra

133 Juan Ruiz Libro de Buen Amor 193

141ESPANtildeOLAS DE ULTRAMAR EN LA HISTORIA Y EN LA LITERATURA

Muy alto y poderoso sentildeor por las letras que a vuestra magestad e escrito a visto el tenor que siempre en este my negocio e tenido agora que veo el peligro que tanto tiempo lo e esperado torno a suplicar lo mismo que asta agora e echo y es que por permisioacuten de dios y por el deudo y sangre que entre vuestra magestad y my ay quiero de vos es-pecial memoria del peligro en que estoy y de los ynconvenientes que se espera allende que dios muy grande mire para ofendido si el Rey my sentildeor pone en efecto lo que todo este reyno tome en este parlamento de todo lo que para estar informado vuestra magestad por su embaxa-dor que aquiacute reside para el remedio tengo esperanza en dios bastaraacute lo que vuestra alteza proveeraacute conque se aga con tiempo no tengo maacutes que decir sino que todo ese reyno y maacutes los perlados y doctas personas que en esta causa defienden estaacuten muy sentidos de la dilacioacuten que su santidad del papa en este negocio a dado y quexanse mucho dello pues por vuestra parte nunca sino justicia se le a demandado y estaacuten el diacutea de oy tan firmes como asta agora para averlo de declarar donde fueren y debe ser entyendese esto poniendo la question como puacuteblicamente se platica que para en lo secreto no ay necesidad de ablar en ello y crea vuestra magestad de que esta verdad y dios me sostienen porque para proseguir mis trabajos no vastaraacute cuerpo humano y confiando en eacutel le suplico guarde la vida de vuestra magestad y acreciente su estado como yo deseo Degramache a 11 de enero= Humilde tiacutea de vuestra magestad= Catalina (RAH Atoacutegrafo precioso Caja 3 Nuacutem 23 Dontildea Catalina de Aragoacuten Reina de Inglaterra Antildeo 1530 Carta al emperador Carlos V pidieacutendole proteccioacuten)

La pobre Catalina presagiaba su triste fin ya que seis antildeos despueacutes la que fuera hija menor de los Reyes Catoacutelicos pasariacutea a mejor vida El no haber podido dar un hijo he-redero al rey Enrique VIII hizo que eacuteste se casase con Ana Bolena declarando nulo su matrimonio anterior sin consentimiento del Papa Roma le excomulgoacute pero eacutel mismo se proclamoacute jefe de la iglesia anglicana A pesar de todo Catalina muere enamorada de su marido y estas uacuteltimas liacuteneas con las que termina su uacuteltima carta y su vida son sufi-cientemente expliacutecitas laquoJuro que sobre todas las cosas mis ojos desean volver a verosraquo (Ximeacutenez de Sandoval 131)

Pese a la enorme influencia directa o indirecta que Erasmo tuviese sobre los pensado-res de la Espantildea del siglo XVI no debemos dejar de destacar tambieacuten la de Fray Luis de Leoacuten tanto por su cariz independiente como por ser un defensor de la libertad indivi-dual Auacuten siendo un representante de la iglesia Catoacutelica tuvo como se sabe que sufrir sus criacuteticas y el rechazo a la exposicioacuten de sus ideas escritos y traducciones biacuteblicas Fray Luis en su obra La perfecta casada deja clara su idea sobre la mujer y la funcioacuten que eacutesta debiacutea ocupar en la sociedad que le tocoacute vivir Para Fray Luis la mujer no era una imagen idealizada del laquoamor corteacutesraquo como la de los escritores neoplatoacutenicos sino un ser de carne y hueso con derechos y responsabilidades en la sociedad de igual manera que el hombre (McKendric 10)

Seriacutea exagerado afirmar que Fray Luis de Leoacuten pone a la mujer por encima del hom-bre en el contexto social Sin embargo y siempre teniendo en cuenta las limitaciones a

142 JUAN FRANCISCO MAURA

las que su profesioacuten y su tiempo le obligaban procura dejar claro que la mujer (casada) merece todo el respeto y ayuda que sea posible de su marido

Porque aunque es verdad que la naturaleza y estado pone obligacioacuten en la casada como decimos de mirar por su casa y de alegrar y des-cuidar continuamente a su marido de la cual ninguna mala condicioacuten de eacutel la desobliga pero no por eso han de pensar que ellos tienen licencia para serles leones y para hacerlas esclavas antes como en todo lo de-maacutes es la cabeza el hombre asiacute todo este trato amoroso y honroso ha de ser principio del marido Porque ha de entender que es compantildeera suya o por mejor decir parte de su cuerpo (Fray Luis de Leoacuten 21 cap 3)

En el reciente estudio de Mar Martiacutenez Goacutengora Discursos sobre la mujer en el Huma-nismo renacentista espantildeol se presenta esa posicioacuten ambigua del fraile agustino en refe-rencia a la funcioacuten de la mujer en la sociedad renacentista

Fray Luis se opone a la funcioacuten otorgada en la eacutepoca a la mujer de mera imagen pasiva Sin embargo fray Luis totalmente encardinado en la cultura del Renacimiento es consciente de la imposibilidad de ignorar ciertos presupuestos De ahiacute la frecuencia en la que el autor anima a las mujeres a buscar una laquofamaraquo puacuteblica que soacutelo una voz masculina puede proveerles Si la mujer desempentildea perfectamente su funcioacuten de casada el marido recibiraacute honra haciendo posible para ella ser alabada por los miembros de la comunidad (187)

Ya se ha mencionado a Isabel la Catoacutelica como impulsora de toda la empresa ultra-marina pero es precisamente gracias a su influencia cuando se pone de moda entre di-versas damas de su tiempo mdashsiglos XV y XVImdash la praacutectica de ciertos estudios y ciencias Beatriz Galindo conocida popularmente como laquoLa latinaraquo fue la que ensentildeoacute latiacuten a la reina Isabel Dice Juliaacuten Juderiacuteas en su obra La Leyenda Negra laquoA los hombres se unen las mujeres en este afaacuten de saber y vemos a Dontildea Beatriz Galindo maestra de latiacuten de la Reina a dontildea Luciacutea de Medrano que explicoacute los claacutesicos en Salamanca a dontildea Fran-cisca de Lebrija que desempentildeoacute una caacutetedra de retoacuterica en la Universidad de Alcalaacuteraquo (Juderiacuteas 74)

Nos cuenta Eustaquio Fernaacutendez de Navarrete que a la muerte del ceacutelebre Antonio de Nebrija quien a impulsos de la reina catoacutelica publicase la primera gramaacutetica europea en lengua romance su hija Antonia le supliacutea en las clases de filosofiacutea y retoacuterica en la Uni-versidad de Alcalaacute cuando eacuteste se encontraba ya viejo y enfermo (xcvi)

No existe ninguna razoacuten para pensar que las las mujeres de clases maacutes favorecidas que pasaron al Nuevo Mundo no disfrutaran de los mismos beneficios y libertades que sus homoacutelogas peninsulares Seraacute preciacutesamente uno de los hijos del mismo Antonio de Nebrija el doctor Sancho de Lebrija quien se encargue de dar poder a Antoacuten Pareja sastre para que la obra escrita de su padre tanto en latiacuten como en romance se distri-buya y venda laquoasiacute en Indias como en otras partesraquo (AHPS Libro del antildeo 1536 Oficio IV Fragmento de un libro Escribaniacutea Cristoacutebal Becerra Folio Primer tercio del legajo Fe-cha 31 de diciembre) En cuanto a las clases menos favorecidas la monarquiacutea espantildeola se preocupoacute desde un primer momento de alfabetizar a todos sus suacutebditos hembras y varones incluyendo los naturales de los territorios conquistados

143ESPANtildeOLAS DE ULTRAMAR EN LA HISTORIA Y EN LA LITERATURA

La educacioacuten de los indiacutegenas americanos fue una sincera preocupa-cioacuten de los reyes de Espantildea casi desde el descubrimiento del Nuevo Mundo Entre las primeras instrucciones de los Reyes Catoacutelicos a sus gobernadores de las Islas Antillas figuran las dadas a Nicolaacutes de Ovan-do en 1503 ordenaacutendole levantar en cada pueblo una escuela junto a la iglesia laquoen la que todos los nintildeos que hubiere en cada una de dichas poblaciones se junten dos veces al diacutea para que alliacute el capellaacuten les ensentildee a leer y a escribirraquo (Vega 9-10)

En la obra renacentista de Cristoacutebal de Villaloacuten El Crotaloacuten se ofrecen unas imaacutegenes muy graacuteficas de las mujeres de la eacutepoca y del laquoexceso de libertadraquo que seguacuten el autor en boca de uno de sus personajes disfrutaban Desde el punto de vista antropoloacutegico y social las siguientes liacuteneas ofrecen una buena imagen de la apariencia fiacutesica de las mujeres de su tiempo y de su actitud vista desde la perspectiva parcial del personaje de la obra

Pues aun no pienses Demophon que la vanidad y perdicioacuten destas livianas mujeres se le ha de pasar a Dios sin castigo que yo te oso afirmar por cosa muy cierta y que no faltaraacute Que por ver Dios su disolucioacuten desenvoltura desverguumlenza y poco recogimiento que en ellas en este tiempo hay visto que asiacute viacutergenes como casadas viudas y solteras todas por un comuacuten viven muy suelta y muy disolutas en su mirar andar y meneo muy curiosas y que por la calle van con un cu-rioso paso en su andar descubierta su cabeza y cabello con grandes y deshonestas crenchas muy alto y estirado el cuello guintildeando con los ojos a todos cuantos topan haciendo con sus cuerpos lascivos meneos (Villaloacuten 860-61 vol 2 canto 20)

El pasaje antes citado pese a parecer humoriacutestico en nuestros diacuteas no lo era tanto en la eacutepoca en que fue escrito ya que la visioacuten de la mujer como parte integrante del pa-trimonio del padre o del marido podiacutea de alguna manera poner en juego laquola honraraquo de su posesor Pese a esto se aprecia como la mujer teniacutea cierto margen de libertad que no se limitaba a las caacutemaras de un convento o a una vida totalmente alejada del mundanal ruido En la siguiente cita continuacioacuten de la anterior se puede observar la serie de ac-cesorios y aderezos que las mujeres de la eacutepoca utilizaban en sus vestidos y cuerpos llamando la atencioacuten la complejidad y sofisticacioacuten de los atuendos descritos

Por esta su comuacuten deshonestidad se cierto que vendraacute tiempo en el cual ha de hacer Dios un gran castigo en ellas pelarse han todos sus cabellos hacieacutendolas a todas calvas y seraacute tiempo en que les quitaraacute Dios todos sus joyeles sortijas manillas zarcillos collares ajorcas y apretadores de cabeza Quitarles ha los partidores de crenchas tenaci-cas salsericas redomillas y platericos de colores y todo geacutenero de afei-tes sahumerios guantes adobados sebos y unturas de manos y otros olores Alfileres agujas prendedores Quitarles ha las camisas muy del-gadas y los manteos vasquintildeas briales saboyanas nazarenas y rebo-cinos y en lugar de aquellos sus cabellos encrespados y enrifados les daraacute pelambre y calvez y en lugar de aquellos apretadores y joyeles

144 JUAN FRANCISCO MAURA

que les cuelgan de la frente les daraacute dolor de cabeza y por cinta de ca-deras de oro muy esmaltadas y labradas les daraacute sogas de muy aacutespero esparto con que se cintildean y aprieten y por aquellos sus muy curiosos y suntuosos ataviacuteos de su cuerpo les daraacute siacutelici y desta manera haraacute Dios que lloren su lascivia y desorden y que de su lujuria y deshonestidad hagan grave penitencia Entonces no habraacute quien las quiera por su he-diondez y miseria en tanto que siete mujeres se encomendaran a un varoacuten y eacutel de todas huiraacute menospreciaacutendolas y aborrecieacutendolas como de gran mal (Villaloacuten 860-61 vol 2 canto 20)

Excelente lista de aderezos femeninos de los cuales pocos son reconocibles en nues-tros diacuteas Gran frustracioacuten debiacutea de tener con las mujeres el autor de estas liacuteneas sien-do al parecer muy poco correspondido por estas uacuteltimas La misoginia que aparece en estas liacuteneas refleja cierta ingenuidad La mujer que se nos presenta debioacute de ser bastante atractiva y sofisticada portando una gran variedad de adornos muchos de ellos de origen oriental y de perfumes que poco tendriacutean que envidiar a los de la mujer moderna En Descripcioacuten breve de toda la tierra del Peruacute Tucumaacuten Riacuteo de la Plata y Chile obra escrita en Chile entre 1603 y 1609 por el padre Reginaldo de Lizarraga nacido en Medelliacuten (Espantildea) en 1545 y trasladado a Ameacuterica a los quince antildeos vemos una asombrosa semejanza con la cita anterior En esta obra del padre dominico dedicada al entonces presidente del Consejo de Indias conde de Lemos observamos coacutemo su descripcioacuten de la vestimenta de las mujeres de Lima ofrece notables semejanzas con la escrita unos antildeos antes en Espantildea En su capiacutetulo 51 titulado laquoDe los vestidos de las mujeresraquo dice lo siguiente

Lo que en esta ciudad [Lima] se admira mucho y aun lo que se ha-biacutea de refrenar es los vestidos y trajes de las mujeres son en esto tan costosas que casi no se sabe como lo pueden sufrir sus maridos La soberbia de ellas es demasiada y no sabemos en lo que han de venir a parar plegue a Dios y no sea en lo que pararon aquellas de quien dice Nuestro Sentildeor Porque las hijas de Sioacuten se ensoberbecieron (esto es las ciudadanas) cuando saliacutean de sus casas llevaban las gargantas ex-tendidas los ojos altos a una y otra parte guintildeaacutendolos los pasos muy compuestos el Sentildeor las volveraacute calvas y les raeraacute los cabellos de sus cabezas les quitaraacute sus chapines y jerbillas bordadas las medias lunas rodetes las cadenas y collares de oro las ajorcas los tocados costosos los punzones de oro para partir las crenchas los zarcillos y los olores los anillos y piedras preciosas etc y por los olores seles daraacute muy pes-tilencial olor y por las cintas de oro sogas de esparto etc No creo yo hay en lo descubierto del mundo ciudad en su tanto ni cuatro veces mayor que a tanta soberbia en este particular como esta nuestra ciu-dad [Lima] llegue acueacuterdome que los antildeos pasados maacutes ha de treinta y ocho que llegando un religioso nuestro de Espantildea nacido y criado en Toledo a nuestro convento de esta ciudad cerca de la fiesta de Cor-pus Christi tratando de ella y de la suntuosidad majestad y riqueza que aquel diacutea en Toledo en calles y ventanas se mostraba le deciacuteamos que no nos espantase porque en nuestra ciudad veriacutea coacutemo no le ha-

145ESPANtildeOLAS DE ULTRAMAR EN LA HISTORIA Y EN LA LITERATURA

ciacutea mucha ventaja Toledo Llegoacute la fiesta vio la riqueza que se mostroacute en los vestidos de las mujeres adornos de ventanas altares y calles dijo que la riqueza de Toledo en este diacutea mostrada no haciacutea muchas ventajas a la de esta ciudad Pues es cierto que hay tanta diferencia de entonces ahora en lo que vamos tratando como de vestidos de aldea a vestidos de corte con justo tiacutetulo se podriacutea moderar por los virreyes esta soberbia pero no seacute por queacute no se modera y siacute seacute por queacute ni los maridos no tienen aacutenimo para moderarlo ni los gobernadores tampo-co (Lizarraga 38 lib 1 cap 51)

Seriacutea injusto y exagerado afirmar que los descubrimientos transoceaacutenicos se hicieron por la presioacuten que ejercieron las mujeres sobre sus amantes para que estos les trajesen laquomaacutes raacutepidamenteraquo todo ese laquosin finraquo de delicadezas exoacuteticas de todo tipo que existiacutean en el Oriente Lo que siacute es cierto es que las mujeres fueron grandes consumidoras de perfumes afeites sedas joyas y otros bienes suntuarios siendo muy conscientes de lo que hoy entendemos como laquomodaraquo Martiacuten Fernaacutendez de Navarrete en su indispensa-ble trabajo sobre los primeros viajes transoceaacutenicos Coleccioacuten de los viajes y descubrimien-tos menciona de paso la situacioacuten de algunas mujeres durante el siglo XV Es precisa-mente esta eacutepoca en la cual portugueses y castellanos entran en conflicto por el control de algunas posesiones en las costas africanas

y crecioacute el lujo a tal extremo que aun las mujeres de los menestrales y artesanos se confundiacutean en los vestidos con las de alto linaje y esta-do usando ropas de ricas telas de seda de oro de lana con forros de martas y pieles y con guarniciones de oro plata y aljoacutefar cuyo gasto por ser ruina de las familias se tratoacute de corregir aunque sin efecto en las Cortes de Palenzuela (M Fernaacutendez de Navarrete 75 21)

El mismo autor resalta la importancia que tuvo para el comercio de Castilla el contar con una buena armada que protegiese a los barcos de piratas y otros peligros Gracias a los inventarios que se han conservado del duque de Beacutejar y de don Alvaro de Zuacutentildeiga conocemos el lujo de estos sentildeores en perlas orientales piedras preciosas telas y demaacutes utensilios de gran valor134 Existe una Real Pragmaacutetica de Fernando el Catoacutelico a Diego Coloacuten en donde aparece nuevamente la conciencia que se teniacutea sobre la manera de ves-tir que deberiacutean llevar las damas castellanas

R PRAGMAacuteTICA SOBRE EL VESTIR Y GASTAR SEDA EN LAS IN-DIAS Valladolid 12 de noviembre de 1509 Don Fernando etc A vos Don Diego Coloacuten nuestro Almirante y Gobernador de las Indias del mar Oceacuteano y a otro cualquier mi Gobernador etc Sepades que yo he sido informado de los muchos gastos y costas que se han hecho y facen y se esperan hacer si yo no lo mando proveer y remediar en el vestir y gastar de las sedas y brocados y bordados en la Isla Espantildeola y en las otras islas y poblaciones de las dichas islas del mar Oceacuteano tra-yendo en ello mucho desorden y yo por el amor y voluntad que tengo

134 AGI Indiferente 418 Libro 2 fol 87v Publicada en DH Am Tom 6 paacutegina 191 DIA Tomo 31 pag 470 DIU Tomo 5 paacuteg 166 Seguacuten la RC a Diego Coloacuten fechada a 14 de noviembre de 1509 es la pragmaacute-tica que se guarda en Castilla sobre la manera de vestir (DIU Tomo 5 paacutegina 174)

146 JUAN FRANCISCO MAURA

a esas dichas Indias y a los pobladores dellas y porque deseo que ellas se aumenten y acrecienten por las haber ganado y descubierto por la gracia de Nuestro Sentildeor con nuestra industria trabajo y costa y los po-bladores dellas no hagan sobre lo suso dicho tan excesivos gastos sino pues que van a ellas con deseo y voluntad de se ayudar y aprovechar del oro que por gracia de Nuestro Sentildeor se descubre de cada diacutea se detengan en lo gastar en semejantes cosas para se aprovechar dellos en otras cosas que maacutes les convenga asiacute para sus personas como para sus haciendas y por evitar y excusar lo suso dicho mandeacute lo platicar con algunos de mi Consejo y por ellos visto se halloacute que porque nuestros suacutebditos y naturales que viven y estaacuten en dichas Indias no gasten sus haciendas en semejantes desoacuterdenes y que las conserven y guarden pa-ra sus menesteres y por el bien y el pro comuacuten de todos generalmente mando dar esta mi carta premaacutetica sancioacuten la cual quiero y mando que haya fuerza y vigor de ley bien ansiacute y a tan cumplidamente como si fuese fecha y promulgada en Cortes por lo cual ordeno y mando que en cuanto a mi merced y voluntad fuere ninguna ni algunas personas de cualquier ley estado condicioacuten que sean que estuvieren de morada o vivienda o en otra cualquier manera en la dicha Isla Espantildeola y en las otras islas desas dichas Indias y tierra firme no puedan traer y traigan ropa alguna de brocado ni de seda ni de chamelote de seda ni zarzahaacuten ni tercenel ni tafetaacuten ni vainas ni correas de espada ni en cinchas ni en sillas ni en alcorques ni en cosa alguna ni tampoco puedan traer ni trai-gan bordados de seda ni chapado de plata ni de oro de martillo ni fila-do ni tejido ni de otra cualquier manera pero que las personas que tu-vieren en las dichas Indias bienes asiacute muebles como raiacuteces que valgan hasta la cuantiacutea de mil castellanos que ellos y los hijos que tuvieren de hasta edad de catorce antildeos traigan jubones y caperuzas y bolsas y ribe-tes y pestantildeas de seda de cualquier color que quisieren con tanto que en una ropa no traigan maacutes de un ribete y que no haya en los dichos ribetes y pestantildeas maacutes anchura de cuanto un dedo pulgar y que no se traiga en los ruedos de las ropas y que puedan traer becas de tercenel y de tafetaacuten y de papahigos de camino aforrados en el mismo tercenel y tafetaacuten y ansiacute mismo permitimos que puedan traer de seda las cora-zas y guarnecer las faldas y gocetes y capacetes y baberas y quejotes y traer cojines de seda en la silla de la jineta y que las mujeres de las tales personas que tuviesen bienes en la dicha cuantiacutea de los dichos mil castellanos y sus hijas siendo doncellas puedan traer gonetes y corseacutes y fajas de dos varas de largo de seda y [borradas dos letras por mancha de tinta] mas y de lo de vestir y mudar cuando quisieren y por bien tuvieren quier sea moyil o faldilla o cota o haacutebito u otra cualquier ropa con tanto que juntamente no puedan vestir ni vistan maacutes de una ni les pongan trepas ni tiras de seda ni de brocado ni de oro tirado ni tejido ni relido ni en las ropas de pantildeo pongan cortapisas ni lisonjas ni trepas ni tiras ni otra guarnicioacuten alguna de seda ni de brocado salvo que puedan traer un ribete o pestantildea de seda de anchura de un dedo pulgar asiacute en

147ESPANtildeOLAS DE ULTRAMAR EN LA HISTORIA Y EN LA LITERATURA

las ropas de seda como en las de pantildeo en los ruedos de las faldas y para las costuras y no otra cosa alguna y que no traigan la dicha seda en las guarniciones de las mulas ni en angarillas ni en sillas ni en pantildeos ni en otra cosa alguna y que ansiacute mismo no puedan traer mantillas de seda ni enforradas en seda sopena que l que contrario hiciere pierda las ro-pas que ansiacute trujere vestidas por primera vez y sea repartido la mitad para el juez que lo juzgare y la otra mitad para el juez que lo acusare y por la segunda que pierda la ropa y se parta como dicho es y sean desterrados de la isla donde viviere para dos antildeos y por cuanto algu-nas personas de los que nuevamente destos reinos de Castillaa van a se avecindar y poblar y estar en las dichas Indias y son de honra acae-ce que no llevan tantos bienes que valgan la dicha cuantiacutea de los mil castellanos que mando que tengan los que hubieren de traer seda en la manera que dicha es que a eacutestos tales no se entienda y extienda lo suso dicho y que puedan traer la dicha seda seguacuten y en la manera que dicha es y no maacutes hasta tanto que haya un antildeo que estaacuten en las dichas Indias que corra y se cuente desde el diacutea que llegare fasta ser cumplido y que siacute cumplido no tuviere bienes que valgan la dicha cuantiacutea de los dichos mil castellanos que no puedan traer seda ninguna so la dicha pena de suso contenida la cual mando a vos las dichas nuestras justi-cias y a cada una de vos que esta mi carta y todo lo en ella contenido y cada cosa y parte dello guardeacuteis y cumplaacuteis y ejecuteacuteis por manera que se cumpla y ejecute lo en ella contenido so pena de perdimiento de los oficios y que seades inhaacutebiles para haber otros semejantes y que pagueis la estimacioacuten de la tal ropa que dejardes de ejecutar y para que lo susodicho sea notorio y ninguno dello pueda pretender ignorancia mando que esta mi carta sea pregonada puacuteblicamente por las plazas y mercados y otros lugares acostumbrados desas dichas islas por prego-nero y ante escribano puacuteblico(Konetzke Coleccioacuten 23)135

Tambieacuten se sabe de las joyas que Rodrigo Ponce de Leoacuten marqueacutes de Caacutediz debioacute dar a dontildea Beatriz Pacheco (M Fernaacutendez de Navarrete 75 22) Lo que siacute queda claro es que la navegacioacuten seraacute a partir de estos antildeos la forma maacutes raacutepida e importante para comerciar con aquellos paiacuteses de Oriente que antes soacutelo era posible alcanzar a traveacutes de rutas terrestres Existe un documento muy representativo de este periodo sobre la posesioacuten de joyas de gran valor por parte de miembros de una de las familias maacutes repre-sentativas residentes en Ameacuterica Los protagonistas son en este caso el almirante Diego Coloacuten y su mujer Mariacutea de Toledo Dice el documento que El jurado Antoacuten Bernal y Juana de Hoces su mujer vecinos de Sevilla en la collacioacuten de Santa Cruz reciben de Diego Coloacuten Almirante de las Indias laquoun joyel muy rico de oro de hechura de escudo que tiene en medio una piedra preciosa grande esmeralda e debaxo de la dicha piedra un rostro de aacutengel labrado en el mismo oro esmaltado e a cada lado del dicho rostro una piedra preciosa diamante pura y debaxo una piedra gruesa pendiente que pesa el dicho

135 AGI Indiferente 418 Libro 2 fol 87v Publicada en DH Am Tom 6 paacutegina 191 DIA Tomo 31 pag 470 DIU Tomo 5 paacuteg 166 Seguacuten la RC a Diego Coloacuten fechada a 14 de noviembre de 1509 es la pragmaacutetica que se guarda en Castilla sobre la manera de vestir (DIU Tomo 5 paacutegina 174)

148 JUAN FRANCISCO MAURA

joyel con todo lo susodicho medio marcoraquo Los citados Antoacuten Bernal y su esposa se dan por pagados de todo lo que se les adeudaba y se obligan a su vez a devolver el joyel al Almirante si este les paga en dinero El 23 de agosto de 1530 siete antildeos despueacutes la virreina canceloacute la anterior obligacioacuten y recuperoacute el mencionado joyel (AHPS Libro del antildeo 1523 Oficio I Escribaniacutea Alonso de la Barrera Folio 1173 Fecha 3 de diciembre) En la misma casa del almirante otra mujer Briolanga Muntildeiz su tiacutea materna se obliga a pagar al mercader genoveacutes Batista Catantildeo 22 ducados de oro laquopor cierto raso que le comproacute y habiacutea de ser pagado en el puerto de Santo Domingoraquo (AHPS Libro del antildeo 1509 Oficio V Libro uacutenico Escribaniacutea Francisco Esquibel Folio Primer tercio del lega-jo Fecha 9 de marzo) Dontildea Briolanga recibiacutea cada antildeo para su mantenimiento 100000 maravediacutes del almirante mayor de las Indias por medio de Gaspar Gurricio monje del monasterio de Santa Mariacutea de las Cuevas (AHPS Libro 1510 Oficio XV Libro II Es-cribaniacutea Bernal Gonzaacutelez Vallesillo Folio primer tercio del legajo Fecha 4 de julio) Resulta interesante hacer notar la temprana presencia (1516) de un ingleacutes en Santo Domingo involucrado igualmente en la compra de telas Se trata de laquoNicolas Arnoteraquo residente en Santo Domingo que debe pagar a Mariacutea Caldera mujer del comendador Diego Barbosa el valor de una cama de sargas de colores de Flandes (AHPS Libro del antildeo 1516 Oficio XV Libro II Escribaniacutea Bernal Gonzaacutelez Vallesillo Folio Primer tercio del legajo Fecha 28 de agosto) Sin embargo anteriormente a esa fecha (1514) encontramos a un veneciano casado con una inglesa mucho maacutes ceacutelebre en sus viajes trasoceaacutenicos laquoSevastiaacuten Cavotoraquo capitaacuten del rey don Fernando y vecino de Sevilla136

De forma paralela se observa tambieacuten un cierto desenvolvimiento de la mujer en su medio lo que equivaliacutea a intercambios de informacioacuten a todos los niveles incluyendo por lo tanto el cultural No era extrantildeo que tuviesen libros de comedias a mano y que llegasen incluso a escribir comedias ellas mismas Efectivamente la sospecha de que las damas llegasen a escribir comedias estaba bien fundada Veacuteanse algunos ejemplos Ana Caro Malleacuten de Soto una de las maacutes famosas dramaturgas de la Sevilla del siglo XVII autora de El conde de Partinupleacutes utiliza el tema del amor en sus maacutes diversas variantes fiacutesicas y espirituales como el eje de casi todas sus obras (Perry 57) Este hecho por otra parte indica el favor del puacuteblico ante un tema tan popular Veacutease otro ejemplo

The drama of this period did not present love and marriage as a simple partnership however and many dramatists contrasted laquoprofaneraquo with laquohonestraquo love Feliciana Enriacutequez de Guzmaacuten who wrote Tragicome-dia Los jardines y campos sabeos in Seville in the early seventeenth cen-tury presented the hero Clarisel as the victim of laquopervertedraquo and fickle Belidiana in part 1 so blinded by her beauty that he feels himself laquoin shackles and in chainsraquo (Perry 57)

Pero las damas espantildeolas de esta eacutepoca no soacutelo escribiacutean comedias algunas tambieacuten se aventuraron a escribir tratados cientiacuteficos Uno de estos casos fue el de Oliva Sabu-co de Nantes Barrera que a finales del siglo xvi escribioacute un tratado meacutedico sobre la naturaleza humana advirtiendo que la lujuria podiacutea perjudicar al cuerpo Se basaba en

136 Sebastiaacuten Caboto o laquoSevastiaacuten Cavotoraquo estaba casado con Juana Cavoto vecina que fue de la ciudad de Londres en la parroquia de San Gil (AHPS Libro del antildeo 1514 Oficio I Libro II Escribaniacutea Mateo de la Cuadra Folio 253 Fecha 14 de Septiembre) citado en CFAAPS Vol 3 doc 128 p 37

149ESPANtildeOLAS DE ULTRAMAR EN LA HISTORIA Y EN LA LITERATURA

la presuncioacuten de que la lujuria provocaba que el cerebro emitiese un liacutequido que iba al estoacutemago enfriaacutendolo y debilitaacutendolo interrumpiendo de esta manera las funciones vitales (Perry 58)

Se sabe que en la eacutepoca de Isabel la Catoacutelica habiacutea muchas mujeres estudiantes y que la propia reina las impulsaba a estos menesteres iniciativa que obtuvo sus frutos en las deacutecadas siguientes Ademaacutes de las conocidas novelistas Mariacutea de Zayas y Sotomayor y dontildea Mariana de Carvajal existioacute toda una serie de escritoras de todos los geacuteneros lite-rarios que florecieron a ambos lados del Atlaacutentico y que no solamente llaman la aten-cioacuten por su nuacutemero sino por la calidad de sus obras Algunas de ellas como dontildea Luisa de Padilla condesa de Aranda calificada por Serrano y Sanz como laquola maacutes notable de cuantas florecieron en Espantildea en el siglo XVIIraquo personificaraacuten a la perfeccioacuten a este tipo de mujeres Tambieacuten deberiacuteamos saber cuaacutentas seriacutean las mujeres que escribieron con pseudoacutenimos masculinos

La informacioacuten sobre las diferentes facetas de la vida femenil con que contamos no es abundante A pesar de todo podemos hacernos una idea maacutes clara de la verdadera situacioacuten de la mujer a traveacutes de una nueva interpretacioacuten de los textos tanto de los medievales como de las croacutenicas de los primeros antildeos del descubrimiento y conquista Algunos estudios relativamente recientes surgidos por el intereacutes general que suscita todo lo concerniente a la mujer han ayudado a considerar nuevas perspectivas La eru-dicioacuten moderna estaacute poniendo en tela de jucio los estereotipos tradicionales en cuanto a la pasividad y relevancia femeninas asiacute como al tradicional misogenismo que se atri-buye a la eacutepoca medieval Cada vez estaacute maacutes claro que la existencia de estas mujeres variaba considerablemente seguacuten la eacutepoca posicioacuten social o situacioacuten geograacutefica por lo que hacer valoraciones categoacutericas sobre laquola situacioacuten de la mujerraquo puede llevar a graves equivocaciones (Dillard 9) Es fundamental para comprender a la mujer espa-ntildeola que pasoacute al Nuevo Mundo tener en cuenta las enormes diferencias de todo tipo que existieron en la sociedad castellana y novomundista Un pintoresco ejemplo es el de laquolas tapadasraquo una usanza de origen aacuterabe que se pondriacutea de moda en Castilla poco despueacutes de la toma de Granada por los Reyes Catoacutelicos y que despueacutes pasariacutea al Peruacute Esta tradicioacuten ha perdurado en algunos pueblos de Espantildea hasta relativamente poco tiempo pueblos como Mojaacutecar (Almeriacutea) y Vejer de la Frontera (Caacutediz) son ejemplo de esta costumbre tambieacuten conocida como el de las laquocobijaacutesraquo

Tras la caiacuteda del reino musulmaacuten de Granada en 1492 la corona espa-ntildeola prohibioacute a las mujeres aacuterabes de Andaluciacutea vestir los velos islaacutemi-cos que cubriacutean sus rostros y ocultaban su identidad No era faacutecil des-arraigar esta costumbre tan ancestral y secular y el emperador Carlos asiacute como su hijo el rey Felipe II tuvieron que repetir la prohibicioacuten Cuando finalmente las moras fueron obligadas a abandonar sus velos y a adoptar el chal castellano comenzaron a utilizar la nueva prenda para cubrir sus rostros dejando al descubierto soacutelo uno de los ojos Esta nueva moda en el uso del chal tradicional nos asegura leoacuten Pi-nelo era extremadamente graciosa sensual y atractiva a causa de la belleza exoacutetica de los ojos de las moras Las mujeres cristianas de Granada Coacuterdoba y Sevilla imitaron pronto la nueva moda de llevar el chal y asiacute nacioacute la laquotapadaraquo hispana Desde Sevilla la nueva moda

150 JUAN FRANCISCO MAURA

fue a las colonias de ultramar y tomoacute raices especialmente en el Peruacute (Martiacuten 317-18)

En un reciente estudio sobre la educacioacuten de la mujer en la Ameacuterica virreinal apare-cen algunos ejemplos significativos de mujeres espantildeolas que consagraron gran parte de sus vidas a la tarea docente Dentro del proceso educativo de las espantildeolas que fueron a las Indias destaca el papel de dontildea Catalina de Bustamante Joseacute de Jesuacutes Vega y Ma-riacutea Luisa Caacuterdenas de Vega dicen en su obra Ameacuterica Virreinal La Educacioacuten de la mujer que esta mujer pocos antildeos despueacutes del descubrimiento del Nuevo Mundo se dedicoacute a trabajar en favor de los indios aunque por desgracia su nombre y sus hechos en la labor docente hayan sido ignorados por los historiadores modernos (Vega 12-13)

Son varias las veces que se nombra a Catalina de Bustamante en el citado estudio y varias las fuentes antiguas en que se recoge la presencia de tan distinguida laquomatrona muy honrada y de buen ejemploraquo de la que ya hablaba Zumaacuterraga y sobre la que se hizo un informe enviado a Carlos V describiendo sus actividades en la Nueva Espantildea firmado por cuatro de los misioneros maacutes conocidos de Meacutexico

El informe dice que los franciscanos de Texcoco acababan de cons-truir un nuevo monasterio y cedido el antiguo A una honrada y honesta y muy virtuosa matrona que se dice Catalina de Bustamante para que ende instruyese a las hijas de los sentildeores de la comarcala cual con el favor de Dios y limosnas que don Hernando [Corteacutes] les haciacutea para su sustentacioacuten [teniacutea en esa casa-hogar] hasta trescientas mujeres antes maacutes que menos (Vega 14)

Estas laquocasas-hogarraquo no estaban regentadas necesariamente por monjas sino por lo que llamaban laquobeatasraquo mujeres que sin estar estar sujetas a la autoridad eclesiaacutestica se dedicaban a un laquolucro honestoraquo Llamadas tambieacuten laquobeateriosraquo eran diferentes a los conventos de monjas y constituiacutean las primeras escuelas de la mujer en la Nueva Espa-ntildea (Vega 20-21) Fue gracias al ejemplo de mujeres como Catalina de Bustamante que dedicaron sus vidas a la educacioacuten de los indiacutegenas que existiesen otras continuando su ejemplo Motoliniacutea dice claramente que laquode ese primer encerramiento (el de Texcoco regentado por Catalina) salieron otras honestas y muy virtuosas duentildeas que ensentildeaban a las maacutes menudasraquo (Vega 23)

Pero dontildea Catalina de Bustamante pese a ser una singular mujer y la iniciadora de la educacioacuten de la mujer en Meacutexico no fue un caso aislado corresponde maacutes bien a un patroacuten al que se ajustaron muchas de las pioneras de la Nueva Espantildea que sembraron instituciones de educacioacuten de la mujer En 1530 unos antildeos maacutes tarde aparecioacute una de las grandes protectoras de la instruccioacuten femenina en Ameacuterica La emperatriz Isabel de Portugal (Vega 24)

Desde comienzos de la conquista fueron varios los centros docentes regentados por mujeres en los que la ensentildeanza no estaba impartida por monjas Una de las institucio-nes maacutes sobresalientes del sistema educativo fue el Colegio de Nintildeas que se establecioacute en la ciudad de Meacutexico a principios del siglo XVI con maestras que no eran monjas Estas seglares conocidas comunmente como laquomigasraquo eran las descendientes de las antiguas beatas Su ubicacioacuten permanente fue determinada en 1548 lugar que serviriacutea de escue-la ininterrumpidamente hasta 1862 cuando el edificio fue convertido en bodega (Vega 60) No se debe perder de vista que no soacutelo por el hecho de llevar una vida secular se

151ESPANtildeOLAS DE ULTRAMAR EN LA HISTORIA Y EN LA LITERATURA

gozaba de maacutes privilegios Era maacutes bien al contrario En las carreteras las mujeres segla-res no inspiraban el mismo respeto que las monjas que ademaacutes teniacutean contacto cons-tante con personas de los dos sexos no pertenecientes a la Iglesia (Arenal 297) Ademaacutes dentro de las murallas del convento desapareciacutean muchas de las barreras sociales que limitaban a la mujer de esta eacutepoca

La presencia femenina y la monarquiacutea

Pues iquestcoacutemo sabes tuacute preguntoacute don Quijote que los grandes llevan detraacutes de siacute a sus caballerizos Yo seacute lo direacute respondioacute Sancho Los antildeos pasados es-tuve un mes en la corte y alliacute vi que paseaacutendose un se-ntildeor muy pequentildeo que deciacutean que era muy grande un hombre le seguiacutea a caballo a todas las vueltas que daba que no pareciacutea que era su rabo Pregunteacute que coacutemo aquel hombre no se juntaba con el otro sino que siempre anda-ba tras deacutel Respondieacuterome que era su caballerizo y que era uso de grandes llevar tras siacute a los tales Desde enton-ces lo seacute tan bien que nunca se me ha olvidado (Cervan-tes Don Quijote)

Los monarcas espantildeoles fueron conscientes de que sin la presencia femenina difiacute-cilmente se podriacutea solidificar una conquista a todos los niveles La mayor parte de los virreyes y altos cargos trajeron a sus mujeres con ellos y en las ciudades principales de Hispano-Ameacuterica como la ciudad de Meacutexico Guatemala Lima o Potosiacute habiacutea mujeres que disfrutaban de una esmerada educacioacuten (gramaacutetica latiacuten poesiacutea historia muacutesica) Esto dariacutea origen a una elegante y hasta cierto punto sofisticada sociedad en la que las mujeres tomaron parte en asuntos maacutes importantes que los que sus homoacutelogas toma-ran en las colonias portuguesas laquoThere were brilliant vice-regal courts at Mexico City and Lima far exceeding anything that could be found in Portuguese or English America during the seventeenth centuryraquo (Boxer 39) Las estadiacutesticas con las que contamos hoy no soacutelo demuestran que las mujeres llegaron al Nuevo Mundo en respetables porcen-tajes sino que ademaacutes tuvieron una participacioacuten activa llegando a intervenir en algu-nos casos en las liacuteneas de vanguardia Resulta difiacutecil aproximarse al estado de aacutenimo de aquellas mujeres que vivieron en eacutepocas tan lejanas Para ello es necesario indagar en los documentos de la eacutepoca para lograr rescatar del pasado todos esos tesoros de la historia muchas veces tergiversados y manipulados con el fin de que sirvan a propoacutesi-tos actuales Es en los viejos manuscritos donde queda testimoniada su presencia tan rica en dolores tragedias y por queacute no en amores Fue la llegada de estas mujeres una brisa de esperanza y de ilusioacuten para aquellos que ya estaban en las tierras de ultramar y

152 JUAN FRANCISCO MAURA

veiacutean venir de su propia tierra aquello que maacutes antildeoraban amantes madres hermanas Un haacutelito de vida y poesiacutea que suavizaba las costumbres de estos rudos y romaacutenticos pioneros laquoporque para ser hombres de tales empresas algo de romaacutentico debioacute de existir en ellos y que es tan propio del espantildeol y abandonariacutean en brazos tan gentiles sus bruscos modales que habiacutean adquirido en aacutespero contacto en selvas y montantildeasraquo (Villafantildee 125)

Hoy sabemos que en la normativa oficial de la Espantildea del siglo XVI y XVII se favoreciacutea el paso de mujeres al Nuevo Mundo Afirmar lo contrario no solamente es falso sino que implica un desconocimiento total de los primeros dos siglos de la colonizacioacuten espantildeola La presencia de estas mujeres espantildeolas fue efectiva laquolas disposiciones al respecto demuestran claramente que se teniacutea especial intereacutes en su arraigo y que se tra-taba de defender su posicioacuten de mujeres casadas con conquistadores y colonizadoresraquo (Villafantildee 126) Los monarcas comprendiacutean que era praacutecticamente imposible que los hombres viviesen sin mujeres y que de ser asiacute era de esperar que se cometiesen abusos con las indias lo que incidiriacutea en la moral social y en el buen gobierno de la colonia Ademaacutes sin un asentamiento definitivo con hogares y familias difiacutecilmente se podriacutea llevar a cabo una presencia permanente en las nuevas colonias (Orsquo Sullivan-Beare 45)

Empezando por los Reyes Catoacutelicos la preocupacioacuten de que en las colonias se esta-bleciesen nuacutecleos que tuviesen como base la familia cristiana fue clara Las capitulacio-nes que a este efecto se hicieron entre los conquistadores y la Corona fueron nume-rosas La efectuada entre Rodrigo de Baacutestidas y Carlos V puede ser un buen ejemplo Fechada en Valladolid el 6 de noviembre de 1524 muestra el propoacutesito de Baacutestidas de establecer una colonia permanente en la desembocadura del riacuteo Magdalena en el terri-torio que hoy vendriacutea a corresponder a Colombia El documento firmado por el Empe-rador comienza asiacute

El Rey Por cuanto por parte de vos Rodrigo de Baacutestidas vecino de la ciudad de Santo Domingo de la Isla Espantildeola Me fueacute fecha relacioacuten que por servicio de la Catholica Reyna Mi Sentildeora e Nuestro os ofre-ceacuteis de poblar e poblariades la provincia e puerto de Santa Marta que en Castilla de Oro llamada la Tierra Firme e que la poblariades dentro de dos antildeos siguientes haciendo en ella un pueblo en que no menos haya en eacutel al presente cincuenta vezinos que los quince de ellos sean casados y tengan consigo a sus mujeres y que lo teniades fecho dentro de dos antildeos y de hoy en adelante lo maacutes que fuese posible asiacute de cris-tianos espantildeoles como de indios (Restrepo 1 30)

De igual manera el priacutencipe Felipe (futuro Felipe II) en las capitulaciones establecidas en 1547 con Juan de Sanabria para que eacuteste fuese como gobernador y capitaacuten general de la dicha provincia escribe lo siguiente laquoPrimeramente que seais obligado e os obligeis a llevar destos Reynos de Castilla a la dicha provincia del Rio de la Plata cien casados con sus mujeres e hijos para poblar la dicha provincia y con ellos llevareis a vuestra muger e hijos (CDI de Ameacuterica y Oceaniacutea 23 119)

En numerosas ocasiones se pone de manifiesto el apoyo de la monarquiacutea a la emigra-cioacuten femenina tantas que difiacutecilmente se podriacutean enumerar todos los casos Lo cierto es que la legislatura vigente favoreciacutea la emigracioacuten y traslado de mujeres con toda una se-

153ESPANtildeOLAS DE ULTRAMAR EN LA HISTORIA Y EN LA LITERATURA

rie de alicientes137 sobre todo si eacutestas estaban casadas pasaje para llevar a las familias franquicia de derecho para los artiacuteculos que portasen consigo favoritismo en cargos destinos y contrataciones a aquellos que pasasen con sus mujeres incluyendo ademaacutes de los castellanos y leoneses a suacutebditos de otras partes de la corona incluso genoveses y portugueses si estos veniacutean acompantildeados de sus consortes (Fernaacutendez Duro 15-16)

Incluso se llegoacute a imponer penas a aquellos hombres casados que no llevasen a sus mujeres con ellos a Indias en el teacutermino de un antildeo El mismo emperador en una ceacutedula otorgada al virrey de la Nueva Espantildea le recomendaba que laquoprocurase persuadir a ca-sarse a los solteros que estuviesen en edad y situacioacuten de hacerloraquo prometieacutendoles que al efectuar el matrimonio seriacutean preferidos en el reparto de indios En la isla de San Juan de Puerto Rico los cargos oficiales y oficios puacuteblicos debiacutean de ser desempentildeados por los casados en primer lugar En Meacutexico ocurrioacute lo mismo con los cargos de corregido-res (Konetzke laquoemigracioacutenraquo 140-41) Felipe II al igual que sus antecesores y sucesores reiteraraacute y justificaraacute los beneficios de los que seraacuten acreedores aquellos que tengan allaacute a sus mujeres laquoque los que han servido en los descubrimientos de las dichas Indias y tambieacuten los que ayudan a la poblacioacuten dellas que tienen allaacute sus mugeres sean preferi-dos en los aprouechamientos qualesquierraquo mandando que despueacutes de los conquistado-res se tuviera en cuenta para la laquoprovisioacuten de los corregimientosraquo a los colonos casados siempre que estuvieran capacitados para dichos cargos (Konetzke laquoemigracioacutenraquo 141)

Las disposiciones en favor del matrimonio son claras ya sea por medio de un favo-ritismo manifiesto como en los casos antes citados o mediante medidas de cohercioacuten para que esta poliacutetica se llevase a cabo Don Sebastiaacuten Ramiacuterez de Fuenleal obispo de Santo Domingo y presidente de la Audiencia de Meacutexico propuso que a aquellos enco-menderos que no estuviesen casados y que no hubiesen tomado parte en la conquista se les quitase los indios concedidos con la obligacioacuten de devolveacuterselos si en el plazo de un antildeo habiacutean contraiacutedo matrimonio (Konetzke laquoemigracioacutenraquo 142-43) Por supuesto hubo excepciones a estas reglas En algunos casos ni la mujer teniacutea especial intereacutes en vivir junto con su marido en las Ameacutericas ni el marido queriacutea ir a buscar a su mujer pasado el plazo de un antildeo En el presente documento y de forma excepcional las auto-ridades reales protegen a los conyuges para que puedan seguir viviendo separados en continentes diferentes

Nuestras justicias de la ysla de Cubagua e otras qualesquier de las nuestras Yndias yslas e tierra firme del mar oceacuteano e a cada uno e qualquier de vos a quieacuten esta mi ceacutedula fuese mostrada por parte de Alonso de Tapia nuestro veedor de la provincia de Paria me ha sido hecha relacioacuten que ha mucho tiempo que reside en esas partes donde nos ha servido en lo que se ha ofrecido e que agora vos otros le apre-miaacuteis a que venga o embiacutee a estos Reinos por su muger lo cual no puede al presente hazer a causa de no ter posibilidad para ello a mi me ha suplicado vos mandase que no le compeliacuteesedes ny apremiaacutesedes a que viniese o enviase por la dicha su muger y dieacutesedes por libres los fiadores que tenyades para que dentro de un antildeo embiariacutea o verniacutea por

137 Reales Ceacutedulas de los antildeos 1502 y 1503 Academia de la Historia Coleccioacuten Muntildeoz tomo 75 fols 209 y 220 citado por Fernaacutendez Duro 15

154 JUAN FRANCISCO MAURA

ella o como la mi merced fuese lo cual visto por los de nuestro consejo juntamente con una peticioacuten presentada por dontildea Mariacutea Gudiel muger del dicho Alonso de Tapia por la cual nos suplica lo mismo que acor-dado que debiacutea mandar esta mi ceacutedula para vos por la qual vos mando que no compelaacuteis ni apremieacuteis al dicho Alonso de Tapia a que venga ni enviacutee a estos reinos por la dicha su muger si no fuere a que la pro-vea de lo que fuere necesario para su mantenimiento y deys por libres quales quier fianzas que sobre ello haya dado e no fagades ende al por alguna manera Firmado en la villa de Valladolid a VII diacuteas del mes de febrero de mil e quinientos e treinta y siete antildeos yo el licenciado Con-de de Samano y sentildealada del cardenal Beltraacuten y Carbajal [Aparte en letra pequentildea] Este diacutea se despachoacute una provisioacuten por la cuaacutel su Mag hizo merced a Alonso de Tapia de la veedoriacutea de la provincia de Paria por muerte de Garciacutea de Aguilar con las clausulas ordinarias y con el mismo salario que teniacutea Aguilar Firmado del emperador y de Beltraacuten y Bernal y Velaacutezquez El Rey (Registro de disposiciones Riacuteo Marantildeoacuten AGI Indiferente General Legajo 416 libro 2 Fols 94v y 95r)

El punto maacutes interesante a destacar de todas estas disposiciones oficiales en cuanto a la emigracioacuten femenina al Nuevo Mundo no es otro que la libertad que se da a la mujer de decidir si quiere o no casada o sin casar trasladarse al nuevo continente no como una imposicioacuten sino como un precepto laquoel espiacuteritu de las disposiciones en el sentido de asegurar la vida marital de los casados significa que la mujer que su marido invita a pa-sar a las Indias puede negarseraquo (Villafantildee 127) Habriacutea que ver las opciones laquorealesraquo ade-maacutes de las legales y econoacutemicas que le quedaban a la mujer si tomaba esta decisioacuten

El saber la libertad de eleccioacuten que estas mujeres teniacutean de antemano antes de aden-trarse en las interminables penalidades y aventuras que los viajes de la navegacioacuten tran-soceaacutenica suponiacutean hace que sus hechos y esfuerzos cobren auacuten maacutes relieve En nume-rosas ocasiones estas mujeres cruzaron el oceacuteano una y maacutes veces sin otro motivo que el de defender los derechos e intereses de los suyos Lo que resulta maacutes valioso de todo esto es que lo hicieran por propia iniciativa arriesgando sus vidas para que se hiciese justicia y para que no les faltase lo necesario a aquellos que estaban en la otra orilla Las autoridades vigentes conocedoras de los vaciacuteos legales existentes en las nuevas colo-nias se apresuraron a poner en vigor aquellas normas que redundaran en el beneficio de los menos favorecidos por las circunstancias La institucioacuten del matrimonio cuya trans-cendencia es fundamental en la vida juriacutedica y social de la mujer tuvo que ser legislada en Ameacuterica con una serie de nuevas disposiciones agregados modificaciones y aclara-ciones Asiacute pues la legislacioacuten de base espantildeola tuvo que sufrir en tierras americanas esta serie de cambios por motivos poliacuteticos y sociales (Villafantildee 126)

Para hacer un sumario de lo dispuesto hasta el siglo XVI en cuanto a la legislacioacuten de las mujeres que teniacutean familia o intereses en Indias merece la pena mencionar que existieron una serie de disposiciones que protegiacutean a las mujeres para que eacutestas no se viesen abandonadas por sus maridos En un epiacutegrafe de la Recopilacioacuten de 1680 (libro VII tiacutetulo 3) se deja ver claramente la preocupacioacuten de las autoridades en este asunto laquoDe los casados en Espantildea e Indias que estaacuten ausentes de sus mujeres y esposasraquo (Vi-llafantildee 126-27)

155ESPANtildeOLAS DE ULTRAMAR EN LA HISTORIA Y EN LA LITERATURA

La lista de disposiciones se hace interminable En los reinados de Fernando el Catoacute-lico Carlos V Felipe II Felipe III o incluso Carlos II la insistencia es constante La ra-zoacuten de esta insistencia seriacutea bastante obvia dado que con un oceacuteano por medio seriacutean muchos los que se aprovechasen de llevar una doble vida marital sin el estricto control y vigilancia de sus mujeres que se encontraban en la peniacutensula La ley XXVII libro IX tiacutetulo XXVI determina laquoDeclaramos por personas prohibidas para embarcarse y pasar a las Indias todos los casados y desposados en estos reinos lsquosino llevaren con ellos sus mujeresrsquo aunque sean virreyes oidores gobernadores o nos fuesen a servir en cual-quier cargo y oficios de Guerra Justicia y Hacienda porque es nuestra voluntad que todos los susodichos lleven a sus mujeresraquo (Villafantildee 127) laquoLos eclesiaacutesticos eran los en-cargados de dar cuenta a los tribunales competentes de aquellos que estando casados permaneciacutean en Indias sin sus mujeres Son reiteradas las disposiciones de Fernando el Catoacutelico en este sentidoraquo138 En 1514 el rey don Fernando ordena en una provisioacuten para la isla Espantildeola laquodoy licencia eacute facultad aacute cualquier persona naturales de estos Reynos para libremente se puedan casar con mujeres naturales de esa dicha ysla sin tener que incurrir por ello en pena algunaraquo (Villafantildee 129)

No se debe olvidar tampoco a aquellas mujeres que decidieron pasar a las laquonuevas tierrasraquo solteras Estas mujeres tambieacuten tuvieron un papel importante en el desarrollo de las nuevas colonias Los organismos espantildeoles del momento como los mandatarios indianos y todos los cronistas no dejaron pasar desapercibida la importancia social de estas mujeres en la poliacutetica de poblamiento laquo[E]s cierto que los pueblos de Indias nuevamente poblados no se tienen por fijos o estables ni permanentes hasta tanto que mujeres espantildeolas entren en ellos y los encomenderos y conquistadores se casen por muchas causas y respetos buenos y saludables que para ello hayraquo (Villafantildee 126-27)

Si la intencioacuten era la de una presencia permanente en las tierras americanas la mujer soltera que pasase a ellas siempre seriacutea un motivo maacutes para el colono o conquistador de continuar en el mismo suelo Se podriacutea empezar una familia si asiacute se quisiese sin tener que pensar en volver a la metroacutepoli ya fuese a disfrutar de los bienes adquiridos o a laquobuscarraquo una esposa El problema aparecioacute cuando se produjo un exceso de mujeres solteras lo que de alguna manera alteroacute la estructura social existente ya que no habiacutea muchas opciones para ellas aparte del matrimonio o el convento

En consideracioacuten a que la experiencia habiacutea demostrado que un exce-sivo nuacutemero de mujeres ejerciacutea perniciosa influencia sobre la moral y las costumbres se suplicaba al rey no otorgase a aquellas tantas auto-rizaciones para emigrar al Peruacute La ciudad de la Plata fundada en 1538 emite en 1577 un informe en el que se expone la urgente necesidad de que se funde un convento de monjas pues en el territorio de las Au-diencias de Los Charcas existiacutea un gran nuacutemero de muchachas que no pudieacutendose casar se hallaban en gran peligro de perderse (Konetzke laquoemigracioacutenraquo 149)

138 Solorzano Pereira Juan de Libro Primero de la Recopilacioacuten de las Ceacutedulas Reales Cartas y Provisiones y Or-denanzas Reales Noticia preliminar de Ricardo Levenne Universidad de Buenos Aires Facultad de Derecho Y Ciencias Sociales Pub del Instituto de Historia del Derecho Argentino Coleccioacuten de Textos y Documentos para la Historia del Derecho Argentino t V Buenos Aires Imp de la Universidad de Buenos Aires 1945 (Li-bro I Ley 10 laquoQue los Espantildeoles puedan casar con Indias y al contrario a su voluntadraquo t2 p 138 citado en Villafantildee 129

156 JUAN FRANCISCO MAURA

Entristece ver coacutemo se manejan las cifras de estas mujeres como si de ganado o de bienes suntuarios se tratase Por otra parte existieron irregularidades como la de pobla-doras espantildeolas que vivieron amancebadas con hombres que ya estaban casados en la peniacutensula Normalmente esto ocurriacutea cuando la estancia del conquistador se prolonga-ba maacutes de lo debido en lugares donde habiacutea pocas espantildeolas Muchas veces nacieron hijos de estas uniones que hicieron auacuten maacutes difiacutecil la situacioacuten para las mujeres que esperaban en Espantildea a un marido que ya no teniacutea ningunas intenciones de volver En los juicios de residencia los documentos acostumbran a citar estos casos ya que era parte de su obligacioacuten castigar las irregularidades extramatrimoniales y salvaguardar las buenas costumbres familiares que con tanto intereacutes se deseaba mantener laquoUn ejemplo nos lo da la isla de Cuba donde en 1532 viven con hombres casados Olalla Hernaacuten-dez Santillana Aranda lsquola Cordobesarsquo Catalina de Leoacuten Catalina Saacutenchez Francisca Hernaacutendez Mayor de Azebedo Juana de Valeros y lsquouna mujer que estaba en casa de Ayalarsquoraquo (Borges 416)

Estos casos no fueron aislados y mucho menos en Cuba centro neuraacutelgico de todo el movimiento de ida y vuelta entre la metroacutepoli y el Nuevo Mundo Estas ocho acusa-ciones por lo tanto no tienen porqueacute considerarse extraordinarias y menos en el lugar maacutes cosmopolita de las Indias en esos momentos al que llegaban flotas a cada momen-to Al parecer existieron casos parecidos en el Riacuteo de la Plata Peruacute y Nueva Espantildea (Ratcliffe 347) El margen legal para que estas mujeres viviesen como quisiesen estuvo limitado por una moral que veiacutea uacutenicamente en el matrimonio o el convento una salida laquovaacutelidaraquo para que fueran aceptadas socialmente Los hombres en iguales circunstan-cias fueron juzgados por una laquomoralraquo mucho maacutes permisiva

La mujer y el cuerpo eclesiaacutestico

Pues iquestquieacuten diablos os traiacutedo aquiacute dijo don Quijote siendo hombre de la iglesia iquestQuieacuten sentildeor replicoacute el caiacutedo laquomi desventuraraquo Pues otra mayor os amenaza dijo don Quijote sino me satisfaceacuteis a todo cuanto primero os pregunteacute (Cervantes Don Quijote )

Otro factor a tener en cuenta en un anaacutelisis sobre la presencia de la mujer en el Nuevo Mundo es el que tiene que ver con la institucioacuten maacutes importante de las que llegaron desde Europa la iglesia catoacutelica Sin aacutenimo de criticar a tan compleja institucioacuten res-ponsable de gran parte de los aconteceres en el Nuevo Mundo vale la pena analizar algunas singularidades Muchos de sus miembros fueron grandes ejemplos de valor e inteligencia a la hora de tratar los maacutes variados y escabrosos asuntos con los que se encontraron los cristianos en la otra orilla durante este periacuteodo Se debe resaltar tam-

157ESPANtildeOLAS DE ULTRAMAR EN LA HISTORIA Y EN LA LITERATURA

bieacuten su caraacutecter medieval en la manera de hacer apostolado y de entender y tratar a los potenciales cristianos Si se tienen en cuenta los privilegios y prerrogativas que algunas de las altas jerarquiacuteas eclesiaacutesticas tuvieron no seriacutea superfluo estimar que un respeta-ble porcentaje de la poblacioacuten de origen laquodudosoraquo muy bien podiacutea venir de la misma iglesia Fueron muchas las viacutectimas y muchas las familias divididas por un padre laquoinvi-sibleraquo Gran parte de los hijos o laquosobrinosraquo de estos sacerdotes pasaron a ocupar cargos similares incluyendo los privilegios que estos cargos llevaban consigo como si se trata-se de cualquier otro oficio gremial transmitido generacionalmente regla tan comuacuten en la Europa medieval Todaviacutea a finales del siglo XIII en Espantildea los derechos de los hijos y nietos de los sacerdotes estaban protegidos por la ley sin que hubiesen podido ser erradicados por las reformas gregorianas (Ratcliffe 347)139

Las letras espantildeolas ya se haciacutean eco de estos lances amorosos entre representantes de la Iglesia y ciertas damas del lugar desde los tiempos del poeta riojano Gonzalo de Berceo En su obra maacutes conocida Los milagros de Nuestra Sentildeora Berceo describe con un realismo ingenuo y sencillo relatos de humor y de humanismo sobre aquellos hombres de carne y hueso que eran perdonados por la intercesioacuten de la Virgen Mariacutea Juan Ruiz por su lado haraacute de su Libro de buen amor la obra maacutes representativa en este sentido Seriacutea prolijo recordar la actuacioacuten de la Iglesia durante diversos periacuteodos de la Edad Media no soacutelo en Espantildea sino en toda Europa En la Espantildea musulmana del siglo XII concretamente en Sevilla el comportamiento de los representantes de la iglesia cristia-na (mozaacuterabe) en territorio islaacutemico es duramente criticado por el sevillano Ibn Abdun Este precioso documento muestra el estricto control y falta de confianza que existiacutea sobre la mujer prohibieacutendolas que entrasen en las laquoabominablesraquo iglesias cristianas

porque los cleacuterigos [cristianos] son libertinos fornicadores y sodomi-tas Asimismo debe prohibirse a las mujeres francas que entren en la iglesia maacutes que en diacuteas de funcioacuten o fiesta porque alliacute comen beben y fornican con los cleacuterigos y no hay uno de ellos que no tenga dos o maacutes de estas mujeres con que acostarse Han tomado esta costumbre por haber declarado iliacutecito lo liacutecito y viceversa Convendriacutea pues mandar a los cleacuterigos que se casasen como ocurre en Oriente y que si quie-ren lo hagan (Leacutevi-Provenccedilal 150)

Pese a existir una convivencia paciacutefica durante gran parte de la Edad Media entre los tres credos monoteiacutestas de Espantildea (cristianos musulmanes y judiacuteos) esto no suponiacutea que no existiese desprecio y desconfianza entre estos grupos religiosos Dice Abdun resaltando el peligro que suponiacutea que una mujer entrase en casa de un cleacuterigo cristiano de vida ceacutelibe

No debe tolerarse que haya mujer sea vieja o no en casa de un cleacuterigo mientras eacuteste rehuacutese casarse Obliacutegueseles ademaacutes a circuncidarse co-mo les obligoacute al-Mutadid pues si a lo que dicen siguen el ejemplo de Jesuacutes (iexclDios les bendiga y salve) Jesuacutes se circuncidoacute y precisamente ellos que han abandonado esta praacutectica tienen una fiesta que celebran solemnemente el diacutea de su circuncisioacuten (Leacutevi-Provenccedilal 150-151)

139 Valdriacutea la pena ver si han cambiado mucho las cosas desde hace quinientos antildeos a esta parte o si in-cluso la iglesia moderna ha retrocedido en tolerancia en cuanto a las relaciones sexuales de los representantes de la Iglesia

158 JUAN FRANCISCO MAURA

El historiador argentino Germaacuten Arciniegas recoge un pasaje ilustrativo de lo men-cionado anteriormente pero trasladado al ambiente de la colonia diciendo que incluso en poblaciones pequentildeas como Santa Fe con poco maacutes de un convento y una ermita la fragilidad de la carne enredaba a frailes soldados y virreyes por igual laquoEl buen So-liacutes que murioacute en olor de santidad con la cabeza reclinada sobre un par de ladrillos y en saya de franciscano cruzaba en las noches el solar de su palacio para ir a besar a la Marichuelaraquo (118-19)

Arciniegas recoge tambieacuten un suceso aparecido en el diario de Lima en 1667 que no tuvo que ser extraordinario durante los primeros antildeos de la colonia laquoEl fraile carmelita mdashGrande hereje y siendo sacerdote deciacutea misa gran perro lujurioso deshonesto que relatando sus maldades dijo que en cierta ciudad habiacutea conocido carnalmente a maacutes de trescientas y sesenta mujeres y en un convento de monjas habiacutea cometido muchos sacrilegios Este lo trujeron preso de Buenos Aires por Chileraquo (119)

Las controversias de la iglesia moderna sobre las relaciones que los eclesiaacutesticos de-ben tener con el sexo femenino parece que no han encontrado todaviacutea respuesta Sigue existiendo miedo y recelo a que la mujer comparta no soacutelo poder en la jerarquiacutea de la iglesiacutea sino en la vida privada de los miembros de la institucioacuten En la Nueva Espantildea el primer obispo de Meacutexico Juan de Zumaacuterraga viendo en la mujer un ser de tentacioacuten irresistible prohibioacute terminantemente la presencia de eacutestas en su casa Ni siquiera para su limpieza y aseo El franciscano Juan de Torquemada se refiere a este comportamien-to como una de las virtudes del popular obispo

Fue este benditiacutesimo prelado muy amigo de la virtud y de virtuosos y aceacuterrimo reprehendedor de vicios y viciosos y tan enemigo de la ociosidad que no permitiriacutea que alguno de su casa estuviese ocioso fue amiciacutesimo de la limpieza por lo cual jamaacutes consintioacute que mujer alguna entrase en su casa aunque fuese necesaria al servicio de ella ni nunca consintioacute que por alguna ocasioacuten subiese mujer a lo alto y aposentos de ella antes lo teniacutea todo cerrado como un monasterio porque sabiacutea (como quien tambieacuten sabiacutea) que la ocasioacuten suele derribar los maacutes fuertes y robustos corazones (450 lib 20 cap 31)

No fueron uacutenicamente miembros de la iglesia catoacutelica los que valoraron la lucha con-tra la tentacioacuten siguiendo al pie de la letra el crudeliacutesimo refraacuten laquoentre santa y santo pared de cal y cantoraquo Se tienen algunas noticias de la vida social de los primeros tiem-pos de la colonia En estos documentos se puede observar coacutemo no distaban mucho las oacuterdenes que se dictaban en la metroacutepoli y las que se llevaban a cabo en la Nueva Espantildea La vida social tanto de damas como de algunos miembros de la iglesia de las colonias era maacutes laquorelajadaraquo de lo que las normas permitiacutean Gracias a la informacioacuten ofrecida por Manuel Romero de Terreros disponemos de los nombres de las primeras virreinas

Las esposas de los primeros cinco Virreyes Don Antonio de Mendoza Don Luis de Velasco Don Gastoacuten de Peralta Don Martiacuten Enriacutequez de Almanza y Don Lorenzo Suaacuterez de Mendoza Conde de la Coruntildea fueron respectivamente Dontildea Caterina de Vargas Dontildea Ana de Cas-tilla y Mendoza hija de Don Diego de Castilla Sentildeor de Gor y Caba-

159ESPANtildeOLAS DE ULTRAMAR EN LA HISTORIA Y EN LA LITERATURA

llerizo de Carlos V Dontildea Leonor de Vieo Dontildea Mariacutea Manrique hija del Marqueacutes de Aguilar y Dontildea Catalina de la Cerda hija del segundo Duque de Medinaceli (Romero 2)

Existen noticias concretas de la seacuteptima virreina de la Nueva Espantildea (1586) dontildea Blanca de Velasco marquesa de Villamanrique En ellas destaca lo anteriormente men-cionado sobre la falta de tolerancia existente en aquellos tiempos difiacutecilmente com-prensible si no fuera por fragmentos esporaacutedicos conservados sobre la vida colonial en la Nueva Espantildea En la siguiente Relacioacuten hecha por autores anoacutenimos sobre la visita que hizo Fray Alonso Ponce Comisario General de la Orden Seraacutefica a las provincias de la Nueva Espantildea se mencionan las eneacutergicas medidas que con los miembros de su orden en su opinioacuten de moral laquomuy relajadaraquo tomoacute este religioso Tambieacuten aparecen mencionadas sus relaciones con la Virreina

Captoacutese ademaacutes la enemistad del gobernante y de la Virreina Dontildea Blanca de Velasco hija del cuarto Conde de Nieva sentildeora seguacuten pare-ce de conducta ligera y caraacutecter maacutes que dominante laquoPor este mismo tiempo (septiembre de 1586) fueron el Virey y la Vireyna a holgarse y recrearse en la cibdad de Xochimilco Posoacute con toda su casa dentro de nuestro convento en un dormitorio deacutel y detuacutevose alliacute siete u ocho diacuteas en que los indios les hicieron grandes fiestas aunque les costaron caras porque en una dellas murieron dos o tres dellos con un tiro que se disparoacute y reventoacute y al principal indio de aquella cibdad hirieron muy malraquo (Romero 3-4)

A pesar del riacutegido control eclesiaacutestico y civil que habiacutea en la Nueva Espantildea existieron tambieacuten pareacutentesis en los que incluso miembros de la iglesia y mujeres mdashhumanos al fin y al cabomdash pudieron disfrutar de algunos momentos de regocijo y alegriacutea Con-tinuando con la cita anterior el mismo autor se queja del laquoexcesoraquo de libertad en los frailes que se suponiacutea que teniacutean que profesar una extremada pobreza y no digamos castidad En primer lugar se describen pormenorizadamente la abundancia en el tipo y cantidad de comida de toda clase dulces y vino que se consumieron con largueza y generosidad durante aquellas fiestas Pero lo que maacutes indigna al autor (o autores) fue que llegasen a entrar mujeres en el convento

y aunque todo esto es malo delante de Dios y delante de los hom-bres lo que maacutes mal parecioacute y de que todo el mundo tuvo que mur-murar fueacute la demasiada libertad rotura y disolucioacuten que hubo en en-trar y estar muy de propoacutesito mujeres no soacutelo la Vireyna y las suyas sino otras muchas dentro del dicho convento y andar por las celdas como si fuese cosa profana y como si no hubiera breve apostoacutelico que soacute graves penas y censuras prohibe estas entradas y como si a los frai-les no los comprendiera el dicho breve por admitirlas y no estuviera asiacute declarado y mandado por nuestros estatutos generales de Toledo (Romero 4-5)

La preocupacioacuten por las laquotentaciones de la carneraquo fuera del matrimonio siempre es-tuvo en la mente de los religiosos espantildeoles asiacute como de otras nacionalidades y reli-

160 JUAN FRANCISCO MAURA

giones que intentaban vanamente erradicar algo tan intriacutenseco al ser humano como a cualquier otra especie animal Esta preocupacioacuten se acentuoacute mucho maacutes en el Nuevo Mundo donde muchas sociedades tribales no veiacutean a la mujer como parte integrante de su propiedad privada La razoacuten es obviamente socioloacutegica y ha existido desde el principio de los tiempos en las civilizaciones maacutes primitivas laquoNo desearaacutes a la mujer del proacutejimoraquo El quebrantar este precepto equivaldriacutea a desestabilizar desde su base a la sociedad judeo-cristiana fundamentada en la familia Las penas aplicadas en estas transgresiones seraacuten lo suficientemente severas como para marginar socialmente mdashen el mejor de los casosmdash a aquellos que las pongan en praacutectica Siendo la mujer la encar-gada por la naturaleza de trasmitir la descendencia de la especie su libertad sexual se veraacute limitada por el peligro de quedar embarazada cada vez que ignore tal elemental precepto140

Primeras escritoras del Nuevo Mundo

Contra cuerdos y contra locos estaacute obligado cualquier caballero andante a volver por la honra de las mujeres cualesquiera que sean Cuanto maacutes por las reinas de tan alta guisa y pro como fue la reina Madaacutesima a quien yo tengo particular aficioacuten por sus buenas partes porque fuera de haber sido fermosa ademaacutes fue muy prudente y muy sufrida en sus calamidades que las tuvo muchas (Cervantes Don Quijote)

Fueron varias las escritoras que durante los siglos XVI y XVII tuvieron una relacioacuten di-recta o indirecta con el Nuevo Mundo Muchas de ellas eligieron la vida monaacutestica mdashen algunos casos como refugio huyendo de sus maridosmdash uacutenica salida en una estructura social en donde no eran muchas las opciones especialmente en una eacutepoca donde el fac-tor religioso pesaba casi tanto como el econoacutemico pero sobre todo para dedicarse a una vida espiritual difiacutecilmente alcanzable en otras circunstancias Mariloacute Vigil apunta que las monjas que lo eran por su propia voluntad ademaacutes de tener inquietudes religiosas tambieacuten las teniacutean intelectuales como es el caso de la escritora miacutestica espantildeola Santa Teresa de Jesuacutes (1515-1582) que ademaacutes de tener una de las vidas maacutes interesantes que se conozcan supo sacar tiempo para escribir las maacutes bellas manifestaciones de la poesiacutea liacuterica y sobre todo de la prosa castellana (Vigil 237-38) Cada una de estas mujeres de-dicadas a la vida literaria y espiritual de su tiempo se merece muchiacutesimo maacutes espacio del que se les pueda ofrecer en estas pocas liacuteneas No obstante con estas pasajeras men-

140 Aunque afortunadamente las cosas han cambiado para la mujer no se debe dejar de mencionar la can-tidad de abusos sexuales de la que es viacutectima en la sociedad moderna

161ESPANtildeOLAS DE ULTRAMAR EN LA HISTORIA Y EN LA LITERATURA

ciones se espera al menos incluirlas y poder despertar el suficiente intereacutes para que sus vidas y sus obras no sigan sumergidas en las simas del olvido Para que estas mujeres de la iglesia pudiesen satisfacer su curiosidad cognoscitiva era necesario romper todas aquellas barreras que supusiesen un estorbo o una restriccioacuten a la hora de investigar consultar o hablar con cualquier persona religiosa de cualquier orden o secular ya fue-se obispo o cleacuterigo Las posiciones intelectuales entre las diferentes oacuterdenes religiosas fueron muy dispares como bien es sabido No eran iguales los planteamientos teoloacute-gicos de los dominicos que los de los franciscanos o los de los carmelitas que los de los agustinos o jesuitas Era necesario por lo tanto tener acceso a estas fuentes de informa-cioacuten para poder constrastar las diferencias y hacer valoraciones propias (Vigil 237-38) El escritor espantildeol Caro Baroja destaca el caraacutecter enciclopeacutedico del catolicismo donde se han integrado corrientes y posturas muy dispares que a traveacutes del diaacutelogo daban cierto espacio al creyente con maacutes curiosidad intelectual para que este pudiese compa-rar y valorar las diferentes opciones que se le ofreciacutean (Vigil 237-38)

Varias de estas mujeres intelectuales fueron hijas de conquistadores que aunque na-cidas en suelo americano seguiacutean expresaacutendose en la lengua de sus padres con no me-nos fuerza que sus contemporaacuteneas peninsulares Es cierto que existieron numerosas escritoras en el Nuevo Mundo durante el siglo XVIII algunas dedicadas incluso al estudio de las matemaacuteticas como la mexicana Dontildea Francisca Gonzaga y Castillo Pero para limitar el presente trabajo a los siglos XVI y XVII uacutenicamente se incluiraacuten ejemplos de estos dos siglos

La peruana Josefa de Alarcoacuten publicoacute en 1648 unas liras dedicadas a las Exequias del Priacutencipe Baltasar Carlos

Cifro en capilla breveEl tribunal de la Magestad maacutes graveEn fe de lo que debeA Carlos que en dos mundos no cabe141

El caso de Sor Jeroacutenima de la Asuncioacuten es muy interesante una mujer que tuvo la oportunidad de viajar a Meacutexico y posteriormente a las Filipinas para cumplir con las mi-siones que le habiacutean sido encomendadas por su orden Nacida en Toledo en 1555 en el seno de una noble y acaudalada familia estuvo destinada a recorrer el mundo ofrecien-do sus servicios a todos los necesitados distinguieacutendose por su ardiente caridad laquovien-do que los galeotes eran tratados con dureza excesiva sobre todo cuando los llevaban de un pueblo a otro procuroacute aliviar las penas de aquellos desgraciados y lo consiguioacute en parteraquo (Serrano y Sanz 268 65) Hija del licenciado e ilustre jurista Pedro Garciacutea Yaacute-ntildeez y de dontildea Catalina de la Fuente ingresoacute contra su voluntad en el monasterio de las Clarisas de Santa Isabel de los Reyes (Toledo) el 5 de agosto de 1570 (Trevintildeo 46) hay que decir que eacutesta no seraacute la uacutenica voluntad contra la que tuvo que luchar

Sor Jeroacutenima se embarcoacute para Meacutexico y de alliacute partioacute hacia Manila junto con siete compantildeeras en el famoso laquoGaleoacuten de Manilaraquo que saliacutea anualmente del puerto mexi-cano de Acapulco Su viaje a las Filipinas duroacute un antildeo y tres meses desde su salida de Espantildea tiempo en el que demostroacute un gran valor y determinacioacuten por el soacutelo hecho de

141 Manuel Serrano y Sanz Apuntes para una biblioteca de escritoras espantildeolas desde el antildeo 1401 al 1833 vols 268 269 270 271 Biblioteca de Autores Espantildeoles (Madrid Atlas 1975) 268 19

162 JUAN FRANCISCO MAURA

embarcarse en tan precarias naves Fue la primera misionera de Oceaniacutea muriendo en Manila en 1621 Alliacute fundoacute el monasterio de Santa Clara que perviviriacutea hasta ser bom-bardeado en la Segunda Guerra Mundial (Trevintildeo 47) Escribioacute su Vida donde trata de la fundacioacuten del convento y de todas las tribulaciones mdashllegoacute a ser excomulgadamdash y satisfacciones que una vida dedicada a una causa justa proporciona Tambieacuten escribioacute una obra de caraacutecter filosoacutefico-teoloacutegico titulada Carta de marear en el mar del mundo nombre alegoacuterico que da cuenta de la enorme distancia recorrida a traveacutes del laquomar del espiacuterituraquo por sor Jeroacutenima He aquiacute algunos de sus versos de caraacutecter religioso

Vuestra soy para vos naciacuteiquestQueacute mandaacuteis hacer de miacute Inaccesible grandezaEterna Sabiduriacuteay bondad del alma miacuteaDios un ser poder y Altezamirad la suma pobrezade eacutesta que se ofrece aquiacuteiquestQueacute mandaacuteis hacer de miacute (Serrano y Sanz 268 66)

Ya en Meacutexico tenemos otro ejemplo de una mujer dedicada por completo a Dios y al estudio y composicioacuten de obras de caraacutecter teoloacutegico Dontildea Ana Mariacutea del Costa-do de Cristo nacida en la ciudad de Tlaxcala hacia el antildeo 1650 Tomoacute la orden de San Francisco para consagrarse a las labores de su orden y a la escritura Se dice que con los escritos de Dontildea Ana Mariacutea se podriacutean formar veinte tomos (Serrano y Sanz 268 282) Estas son algunas de sus obras Vida y muerte de Jesucristo Nuestro Sentildeor Vida del Seraacutefico Padre San Francisco de Asiacutes Vida de la iacutenclita Virgen Santa Clara Vida del sutiliacutesimo doctor Juan Duns Escoto

Pero no todas las monjas tuvieron vidas tan dedicadas al estudio y la oracioacuten Loacutegica-mente entre un nuacutemero tan grande de mujeres existioacute de todo y seriacutea un error pensar que todos los conventos femeninos estaban integrados por laquocaacutendidas palomasraquo Una monja en el siglo XVI y XVII teniacutea mucha maacutes fuerza que una mujer ordinaria ya que actuaban en grupo y la entrada a los recintos donde viviacutean estaba permitida solo a mu-jeres Esta situacioacuten las haciacutea mucho maacutes fuertes a todos los niveles que una mujer sola protegida uacutenicamente por su familia laquoLas monjas durante los siglos XVI y XVII lucharon por eludir la clausura y por zafarse del control que los frailes de las secciones masculi-nas de sus congregaciones ejerciacutean sobre ellasraquo (Vigil 230) Soacutelo un antildeo maacutes tarde que dontildea Ana Mariacutea del Costado de Cristo en 1651 y a 12 leguas de Meacutexico nacioacute la sin par Sor Juana Ineacutes de la Cruz hija de don Pedro Manuel de Asbaje natural de Vergara (Vizcaya) y de Dontildea Isabel Ramiacuterez de Santillana hija de espantildeoles (Serrano y Sanz 268 289) Por ser sin lugar a dudas la poeta maacutes importante de su tiempo y probable-mente la maacutes conocida del mundo hispano no profundizaremos en ella Su obra es un canto a la inteligencia y el exponente maacutes destacado de la literatura barroca americana tanto en prosa como en verso Destacareacute simplemente que Sor Juana Ineacutes pese a vivir en un sociedad donde no eran excesivas las libertades concedidas a las mujeres tuvo el caraacutecter y la determinacioacuten de dejarnos las maacutes bellas poesiacuteas amorosas que si bien estuvieron enmarcadas en un ambiente religioso como era de esperar por su condicioacuten

163ESPANtildeOLAS DE ULTRAMAR EN LA HISTORIA Y EN LA LITERATURA

pudieron transcender como unas de las maacutes bellas manifestaciones literarias que hoy en diacutea se conservan Fue su agudeza mental sensibilidad y cultura tal que no fueron suficientes los soacutelidos muros del convento para contener el genio de tan extraordinaria mujer Recordemos sus conocidiacutesimos versos en defensa de las mujeres

Hombres necios que acusaacuteisa la mujer sin razoacutensin ver que sois la ocasioacutende lo mismo que culpaacuteis142

Las metaacuteforas y la delicadeza que emplea en rebatir a su obispo en su laquoRespuesta a sor Filotea de la Cruzraquo no son solamente el epiacutetome del feminismo de su tiempo sino una de las maacutes brillantes manifestaciones del barroco hispano Poesiacutea teatro ensayo y un conocimiento extraordinario de las ciencias claacutesicas de su tiempo hacen de esta mujer un ejemplo extraordinario de las letras universales Ya son cientos los artiacuteculos y libros que se han escrito sobre Sor Juana y no dejan de aparecer tesis doctorales sobre los maacutes diversos temas conectados con la citada autora143 Como nos dice Stephanie Merrim en su documentada obra Early Modern Womenrsquos Writing and Sor Juana Ineacutes de la Cruz

She wrote and published on secular themes as atypical for a nun as human love Her remarkably extensive writings essayed and reenacted most of the (male) poetic dramatic theological and even philosophi-cal discourses of her times in the metropolis making her works a com-pendium of baroque culture in its diversity and syncretism Sor Juana self-creation as a learned women effectively toppled many of the walls in which she was materially enclosed and positioned her within the dynamic world of early modern European culture (xii)

No se debe dejar de mencionar a otras escritoras novohispanas de la eacutepoca que aun-que no fueron tan proliacuteficas y relevantes como Juana Ineacutes de la Cruz dejaron testimo-nio de algunos acontecimientos que tienen intereacutes socioloacutegico o testimonial Este es el caso de Dontildea Mariacutea Estrada Medinilla de igual nombre y apellido que la mujer que acompantildeoacute a las tropas de Corteacutes en su primera entrada a Meacutexico Natural de Meacutexico publicoacute toda su obra a mediados del siglo XVII concentraacutendose principalmente en la lle-gada del Marqueacutes de Villena virrey y capitaacuten general de la Nueva Espantildea a la ciudad de Meacutexico en el antildeo 1640 Escrita en octavas reales la obra trata de las fiestas de toros y cantildeas con que se obsequioacute al citado virrey Fue impresa en Meacutexico en 1641 (Serrano y Sanz 269 402)

Mucho maacutes importante para el presente libro es Dontildea Isabel de Guevara que escribioacute en 1556 la carta en que se expone la ayuda que ofrecieron las mujeres en el descubri-miento y conquista del Riacuteo de la Plata No cabe la menor duda de que esta carta es uno

142 Para una mejor comprensioacuten del caraacutecter de esta excepcional mujer veacutease entre los numeros trabajos publicados Fredo Arias de la Canal Intento de psicoanaacutelisis de Juana Ineacutes y otros ensayos sorjuanistas (Meacutexico Frente de Afirmacioacuten Hispanista 1972) 47

143 Veacuteanse entre otros trabajos Octavio Paz Sor Juana Ineacutes de la Cruz o las trampas de la fe Georgina Sabat de Rivers En busca de Sor Juana Margo Glantz Sor Juana la comparacioacuten y la hipeacuterbole Gerard C Flynn Sor Juana Ineacutes de la Cruz Stephanie Merrim Feminist perspectives on Sor Juana Ineacutes de la Cruz Pamela Kirk Sor Juana Ineacutes de la Cruz religion art and feminism

164 JUAN FRANCISCO MAURA

de los documentos maacutes importantes con que contamos en relacioacuten a la aportacioacuten fe-menina en el proceso de la conquista de Ameacuterica Su importancia viene dada por varios factores Primero es uno de los primeros testimonios mdashsi no el primeromdash en donde se expone abiertamente la indispensable colaboracioacuten de las mujeres en el descubrimien-to y conquista de tierras en el Nuevo Mundo laquoQue si no fuera por ellas todos fueran acabadosraquo En segundo lugar la informacioacuten vertida en estas liacuteneas presenta en parte la manera de pensar de una mujer espantildeola en tales circunstancias Extraordinario tes-timonio de primera mano que nos da una idea de lo que significoacute en muchos casos el valor y entrega constantes de muchas de estas mujeres que auacuten a riesgo de perder sus vidas no dudaron en luchar al lado de los hombres por una causa que consideraban laquocomuacutenraquo

La relevancia histoacuterica de dicha carta hace que merezca ser transcrita en su totali-dad

Carta de dontildea Isabel de Guevara a la princesa gobernadora dontildea Juana exponiendo los trabajos hechos en el descubrimiento y conquista del Riacuteo de la Plata por las mujeres para ayudar a los hombres y pidiendo repartimiento

para su marido Asuncioacuten 2 de julio de 1556

Muy alta y muy poderosa sentildeora

A esta provincia del Riacuteo de la Plata con el primer gobernador de ella don Pedro de Mendoza hemos venido ciertas mujeres entre las cuales ha querido mi ventura que fuese yo la una y como la armada llegase al puerto de Buenos Aires con mil quinientos hombres y les faltase el bastimento fue tamantildea el hambre que a cabo de tres meses murie-ran los mil esta hambre fue tamantildea que ni la de Jerusalem se le puede igualar ni con otra ninguna se puede comparar Vinieron los hombres en tanta flaqueza que todos los trabajos cargaban de las pobres mu-jeres asiacute en lavarles las ropas como en curarles hacerles de comer lo poco que teniacutean limpiarlos hacer centinela rondar los fuegos armar las ballestas cuando algunas veces los indios les veniacutean a dar guerra hasta cometer a poner fuego en los versos y a levantar los soldados los que estaban para ello dar arma por el campo a voces sargentean-do y poniendo en orden los soldados porque en este tiempo como las mujeres nos sustentamos con poca comida no habiacuteamos caiacutedo en tanta flaqueza como los hombres Bien creeraacute V A que fue tanta la so-licitud que tuvieron que si no fuera por ellas todos fueran acabados y si no fuera por la honra de los hombres muchas maacutes cosas escribiera con verdad y los diera a ellos por testigos Esta relacioacuten bien creo que la escribiraacuten a V A maacutes largamente y por eso cesareacute Pasada esta tan peligrosa turbunada determinaron subir el riacuteo arriba asiacute flacos como estaban y en entrada de invierno en dos bergantines los pocos que quedaron vivos y las fatigadas mujeres los curaban y los miraban y les guisaban la comida trayendo la lentildea a cuestas fuera del naviacuteo y animaacutendolos con palabras varoniles que no se dejasen morir que presto dariacutean en tierra de comida metieacutendolos a cuestas en los

165ESPANtildeOLAS DE ULTRAMAR EN LA HISTORIA Y EN LA LITERATURA

bergantines con tanto amor como si fueran sus propios hijos Y como llegamos a una generacioacuten de indios que se llaman tinbues sentildeores de mucho pescado de nuevo los serviacuteamos en buscarles diversos modos de guisados porque no les diese en rostro el pescado a causa de que lo comiacutean sin pan y estaban muy flacos Despueacutes determinaron subir el Paranaacute arriba en demanda de bastimento en el cual viaje pasaron tanto trabajo las desdichadas mujeres milagrosamente quiso Dios que viviesen por ver que en ellas estaba la vida de ellos porque todos los servicios del naviacuteo los tomaban ellas tan a pechos que se teniacutea por afrentada la que menos haciacutea que otra sirviendo de marear la vela y gobernar el naviacuteo y sondar de proa y tomar el remo al soldado que no podiacutea bogar y escotar144 el naviacuteo y poniendo por delante a los soldados que no se desanimasen que para los hombres eran los trabajos verdad es que a estas cosas ellas no eran apremiadas ni las haciacutean de obliga-cioacuten ni las obligaba si solamente la caridad Asiacute llegaron a esta ciudad de la Asuncioacuten que aunque ahora estaacute muy feacutertil de bastimentos en-tonces estaba de ellos muy necesitada que fue necesario que las muje-res volviesen de nuevo a sus trabajos haciendo rosas con sus propias manos rosando y carpiendo y sembrando y recogiendo el bastimento sin ayuda de nadie hasta tanto que los soldados guarecieron de sus fla-quezas y comenzaron a sentildeorear la tierra y adquirir indios e indias de su servicio hasta ponerse en el estado en que ahora estaacute la tierra He querido escribir y traer a la memoria de V A para hacerle saber la ingratitud que conmigo se ha usado en esta tierra porque al presente se repartioacute por la mayor parte de los que hay en ella asiacute de los anti-guos como de los modernos sin que de miacute y de mis trabajos se tuviese ninguna memoria y me dejaron de fuera sin me dar indio ni ninguacuten geacutenero de servicio Mucho me quisiera hallar libre para me ir a presen-tar delante de VA con los servicios que a SM he hecho y los agravios que ahora se me hacen mas no estaacute en mi mano porque estoy casada con un caballero de Sevilla que se llama Pedro de Esquivel que por servir a SM ha sido causa que mis trabajos quedasen tan olvidados y se me renovasen de nuevo porque tres veces le saqueacute el cuchillo de la garganta como allaacute VA sabraacute A que suplico mande me sea dado mi repartimiento perpetuo y en gratificacioacuten de mis servicios [en el origi-nal del AHN Diversos doc 141 dice ademaacutes mande que sea proveydo mi marido de alguacuten cargo conforme a la calidad de su persona pues el de su parte por sus servicios lo merece] lo merece Nuestro sentildeor acre-ciente su Real vida y estado por muy largos antildeos De esta ciudad de la Asuncioacuten y de julio 2 1556 antildeosServidora de V A que sus Reales manos besa

Dontildea Isabel Guevara

144 Sacar agua de un riacuteo acequia o presa

166 JUAN FRANCISCO MAURA

Sobremdash A la muy alta y muy poderosa sentildeora Princesa dontildea Joana Gobernadora de los reinos de Espantildea etc ndash En su Consejo de Indias (Isabel de Guevara 619-21)

Iroacutenicamente la carta teniacutea que llegar a manos de la desdichada heredera del trono de Castilla e hija de los Reyes Catoacutelicos Juana laquola Locaraquo que habiacutea muerto el antildeo an-terior Son profeacuteticas las palabras de esta mujer no soacutelo porque sus hechos personales quedasen en el olvido sino porque incluso se ha borrado la historia de las mujeres en el Nuevo Mundo negando su presencia Por lo menos Isabel Guevara tuvo acceso a una pluma iquestCuaacutentas seriacutean las que ni siquiera sabriacutean escribir

Otra contemporaacutenea fue dontildea Leonor de Iciz que vivioacute durante la segunda mitad del siglo XVI Interesa sobre todo por los sonetos que escribioacute en elogio de Ercilla soldado que participoacute en la conquista de Chile y que se inmortalizoacute con su obra La Araucana (Serrano y Sanz 269 534) Lo mismo hizo Dontildea Bernarda Lintildeaacuten en 1610 autora de otro soneto en memoria del capitaacuten Gaspar Peacuterez de Villagraacute que participoacute en la conquista de Nuevo Meacutexico (Serrano y Sanz 270 14) Los escritos de estas mujeres tratan de de dos de las eacutepicas maacutes dramaacuteticas de la conquista

En el Peruacute y en pleno siglo XVII aparece otra fundadora de conventos Sor Bernardina de Jesuacutes que ademaacutes fue comparada con Santa Teresa por la semejanza de sus laquocartasraquo con las de la santa de Avila Fue fundadora del convento de Tacunga en Quito maacutes tarde destruiacutedo por un terremoto Dice Serrano y Sanz con respecto a su biografiacutea un tanto legendaria que fue carmelita descalza de Lima y hermana de Dontildea Mariacutea Benavides y Esquivel abuela de D Pedro de Peralta Barnuevo (Serrano y Sanz 269 553) Dicen que esta santa se alimentoacute durante treinta antildeos con laquochochos y caacutescaras de naranja hecho tan raro como increiacuteble Cuando fallecioacute reparaban las monjas en ponerle una vara de azucenas porque habiacutea sido casada y aquellas flores aparecieron milagrosamente sobre el cadaacuteverraquo (Serrano y Sanz 269 553)

Otra limentildea del primer cuarto del siglo XVII con reputacioacuten de santa fue Dontildea Luisa Melgarejo En este caso no se trata de una religiosa de oficio sino de la mujer del doctor Juan de Soto La uacutenica diferencia es que dontildea Luisa al parecer teniacutea laquovisiones y reve-lacionesraquo lo que debioacute poner nervioso a maacutes de un miembro del tribunal del laquoSanto Oficioraquo que consideraron sus escritos laquoculpadosraquo De su papel de laquosantaraquo pasa por lo tanto al de laquoposesaraquo o laquoendemoniadaraquo El inquisidor de Lima Gaitaacuten escribioacute un infor-me donde a traveacutes de la opinioacuten puacuteblica y de otras averiguaciones se deciacutea que dontildea Luisa Melgarejo laquomujer santaraquo sabiacutea cuando las almas de los difuntos saliacutean del Purga-torio El diacutea 14 de noviembre de 1623 se decidioacute tomar posesioacuten de todos los cuadernos en los que habiacutea escrito las experiencias de todos sus laquoarrobos suspensiones extasis y revelacionesraquo Estos cuadernos una vez recogidos presentaron toda una serie de al-teraciones borrones adiciones enmiendas incluso diferente letra por lo que despueacutes de haber sido examinados resultaron culpables145 Excelente imaginacioacuten debioacute tener dontildea Luisa Melgarejo la suficiente al parecer para convencer a algunos miembros de la iglesia de que en sus escritos laquohabiacutea algoraquo que mereciacutea la pena Estas cosas ocurriacutean en Lima uno de los centros culturales maacutes importantes de la vida social y poliacutetica en la Ameacuterica espantildeola Lima a comienzos del siglo XVII seguacuten el empadronamiento llevado

145 Serrano y Sanz 270 47 Veacutease J T Medina Historia del tribunal del Santo Oficio de la Inquisicioacuten de Lima (1569-1820) (Santiago Imprenta Gutemberg 1887) Tomo II 34-41

167ESPANtildeOLAS DE ULTRAMAR EN LA HISTORIA Y EN LA LITERATURA

a cabo en 1614 por el marqueacutes de Montesclaros era una ciudad de 25000 habitantes de los que 11000 eran espantildeoles El nuacutemero de religiosos y religiosas llegaba a 1720 (Pittaluga 77)

Se sabe que en la Isla de Santo Domingo durante el siglo XVI nacioacute o al menos resi-dioacute una poeta de ceacutelebre apellido en los aconteceres del Nuevo Mundo Dontildea Elvira de Mendoza de la que se conserva un manuscrito en la Real Academia de la Historia laquoCantares miacuteos que estaacuteis rebeladosraquo Eugenio de Salazar hace un elogio de ella como poeta en un Soneto a la ilustre Poeta y Sentildeora Dontildea Elvira de Mendoza moradora en la ciudad de Santo Domingo (Serrano y Sanz 270 53)

Nacida en Burgos sobre el antildeo 1590 dontildea Luisa de Padilla merece un lugar aparte dentro del grupo de mujeres escritoras de su eacutepoca Por su estilo faacutecil y castizo su no-vedad de pensamientos y su rica erudicioacuten recibioacute el siguiente comentario de Manuel Serrano y Sanz laquoPocas figuras hay en nuestra historia literaria femenil que puedan compararse a esta eminente prosista acaso la maacutes notable de cuantas florecieron en Es-pantildea durante el siglo XVIIraquo (Serrano y Sanz 270 95-96) Este comentario y comparacioacuten deberiacutea ampliarse para que tambieacuten incluyese a laquola historia literaria varonilraquo

Dontildea Luisa fue defensora de la labor que la Inquisicioacuten estaba realizando en la laquolim-piezaraquo de mujeres laquosoldados del demonioraquo que existieron en algunas provincias espa-ntildeolas en aquel tiempo Muchas de las mujeres que combinaban la magia con los po-deres curativos fueron condenadas no solamente por hombres de la Inquisicioacuten sino tambieacuten por mujeres de todas las clases sociales como es el caso de Luisa de Padilla condesa de Aranda En su obra Elogios de la verdad e invectiva contra la mentira preveniacutea contra aquellos que practicaban artes en contra de la religioacuten cristiana La magiacutea negra seguacuten Padilla era la causante de que muriesen casi tantas personas como otras causas naturales habieacutendose descubierto hasta seis mil brujas en Vizcaya y Guipuzcua con-fesando una mujer de un pueblo pequentildeo haber matado con su laquomagiaraquo a ochocientas personas (Perry 31) Eran estos laquomales de ojoraquo y maldiciones seguacuten la autora las causas de que se secasen los pechos de las madres lactantes que se separasen las parejas casa-das y que abortasen las embarazadas (Perry 31)

Si se tiene en cuenta que dontildea Luisa estuvo emparentada con la maacutes rancia aristocra-cia de su tiempo o lo que es lo mismo con algunos de aquellos que en cierta manera dirigiacutean los destinos de Espantildea en aquella eacutepoca (Duques de Lerma Duque de Uceda Marqueacutes de Cueacutellar Conde de Santa Gadea Marqueacutes de Belmonte por citar algunos) se comprenderaacute mejor su identificacioacuten con una institucioacuten que en teoriacutea velaba por la salvaguarda de los valores laquoeternosraquo de una Espantildea destinada a ser la campeona del ca-tolicismo durante los siglos XVI y XVII El padre de dontildea Luisa fue don Martiacuten de Padilla y Manrique extraordinario militar que proboacute su valor contra enemigos moriscos ingle-ses holandeses piratas berberiscos y el renegado genoveacutes Muley Faxad Fue veterano de la batalla de Lepanto donde apresoacute a cuatro galeras y acompantildeoacute con su escuadra a la reina Dontildea Margarita de Austria cuando vino de Geacutenova en 1598 laquoHabiacutea obtenido a 24 de julio de 1587 el tiacutetulo de Conde de Santa Gadea y en 1596 el de Capitaacuten General de la Armada del mar Oceacuteanoraquo (Serrano y Sanz 27095-96)

Por otra parte tambieacuten se sabe que dontildea Luisa participoacute directamente y desde tem-prana edad en la praacutectica de algunas actividades intelectuales como la historia y la arqueologiacutea a la vez que dedicaba su tiempo a virtudes cristianas como la caridad y el socorro de los necesitados (Serrano y Sanz 270 97) Resulta mucho maacutes faacutecil compren-

168 JUAN FRANCISCO MAURA

der la postura ideoloacutegica de esta gran mujer si tienen en cuenta ademaacutes de los factores antes mencionados otros tantos de caraacutecter biograacutefico concernientes a su educacioacuten y matrimonio

Otra escritora fue la mexicana dontildea Mariacutea Casilda Pozo natural de Temestla (Meacutexi-co) Nacida en el mes de abril de 1682 dejoacute escrita su biografiacutea en 16 cuadernos el ma-nuscrito original se encuentra en la biblioteca del colegio de San Gregorio de Meacutexico Fue su confesor el jesuiacuteta Domingo Quiroga que fue quieacuten la incitoacute a escribir su obra (Serrano y Sanz 270 137) Sor Juana de San Antonio aparece a principios del siglo XVII formando parte de un grupo de religiosas espantildeolas que fueron a Manila por la ruta de Meacutexico Ademaacutes de distinguirse por sus cualidades personales su obra interesa por ofrecer informacioacuten testimonial y costumbrista acerca de la forma de vestir de chinos y japoneses (Serrano y Sanz 270 225)

Otra monja esta vez ecuatoriana fue Gertrudis de San Ildefonso Nacida en 1652 profesoacute su vocacioacuten en el convento de Santa Cruz de Quito dejando escrita su vida por mandato de su confesor el padre Martiacuten de la Cruz el cual hizo una biografiacutea laquoen tres gruesos voluacutemenesraquo Gertrudis de San Ildefonso murioacute en 1709 (Serrano y Sanz 270 300) en olor de santidad

Sor Mariacutea Ana Agueda de San Ignacio nacioacute el 3 de marzo de 1695 en la dioacutecesis de la puebla de los Angeles en un rancho del lugar de Santiago Tecaliacute (Serrano y Sanz 270300) Esta monja mexicana escribioacute varias obras durante su vida conventual a lo largo de la cual desempentildeoacute el cargo de priora por muchos antildeos Entre sus obras todas de caraacutecter piacuteo y de laquoamor divinoraquo escribioacute un curioso y laquocopiosoraquo tratado de la Leche virginal de la Soberana Madre de Dios El padre Fr Juan de Villa Saacutenchez hace el siguiente comentario al respecto laquoen que hablando primero en sentido natural de los beneficios que debemos a Nuestra Sentildeora pasa a tratar en sentido miacutestico y alegoacuterico enten-diendo en la leche la doctrinaraquo (Serrano y Sanz 270301) Mexicana fue tambieacuten Sor Petronila de San Joseacute que ejercioacute como abadesa del Real monasterio de Jesuacutes Mariacutea de la ciudad de Meacutexico Escribioacute Vidas de varias religiosas ejemplares obra que tiene su im-portancia ya que al parecer laquoDe esta obra se sirvioacute D Carlos de Siguumlenza y Goacutengora para escribir su Parayso Occidental (Meacutexico 1684) seguacuten eacutel mismo declara en el proacutelogo diciendo lsquoa quien si hay algo bueno en esta historia se le debe todorsquoraquo (Serrano y Sanz 270 354) Menos conocida fue su compatriota Sor Luisa de Santa Catalina natural de Xacona laquopueblo situado en las inmediaciones de Zamora (Meacutexico)raquo siendo bautizada en 1682 Escribioacute Cartas espirituales a su confesor el P Juan Loacutepez de Aguado (Serrano y Sanz 270 361-62)146

Todos estos escritos la mayoriacutea de ellos ignorados por el gran puacuteblico tienen la im-portancia de darnos una perspectiva diferente En otras palabras ensentildearnos la maacutes refinada sensibilidad de muchas mujeres que permanecieron y en su mayoriacutea siguen permaneciendo a laquooscurasraquo de una eacutepoca tan rica de la literatura espantildeola como fue el Siglo de Oro Este siglo fue tambieacuten en su dimensioacuten literaria y artiacutestica patrimonio de la mujer

146 Para profundizar en muchas de estas escritoras hispano-americanas la consulta de la Biblioteca Hispano-Americana de Beristain de Souza resulta de capital importancia

169ESPANtildeOLAS DE ULTRAMAR EN LA HISTORIA Y EN LA LITERATURA

Sor Nada ardores divinos de una monja adolescente escritos ineacutedi-tos de una recieacuten profesa del siglo XVI147

iexclQueacute encantadores son tus amores hermana miacutea espo-sa iexclQueacute deliciosos son tus amores maacutes que el vino Y el aroma de tus perfumes es mejor que el de los baacutelsamos Miel virgen destilan tus labios esposa miel y leche hay en tu lengua y el perfume de tus vestidos es como aroma de incienso (Cantar de los Cantares 4 10-11)

Sor Nada llamada asiacute por humildad seguacuten dice el Indice de manuscritos de la Biblio-teca Nacional de Madrid es uno de los ejemplos maacutes desconocidos e interesantes que tenemos de la poesiacutea y prosa amoroso-religiosa del siglo XVII Hasta la fecha nunca se habiacutea publicado su obra e incluso hasta el antildeo 1995 para mi sorpresa no habiacutea copias microfilmadas de sus manuscritos en la Biblioteca Nacional Serrano y Sanz en su libro Apuntes para una Biblioteca de Escritoras Espantildeolas hace una escueta y pasajera mencioacuten de esta mujer y de su obra (68-69) siendo eso todo lo que hasta ahora se sabiacutea de ella Sus escritos consisten en los siguientes manuscritos

1 laquoEn queacute consiste un verdadero amor de Diosraquo 9 hojas uacutetiles en 4ordm letra del siglo XVII Biblioteca Nacional de Espantildea Manuscrito 1295926

2 laquoPintura del Propio Amorraquo laquoPintura del propio Amorraquo 10 hojas uacutetiles en 4ordm letra del siglo XVII Biblioteca Nacional de Espantildea Manuscrito 1295927

3 laquoEsplicacioacuten sobre en queacute consiste la paz del Almaraquo laquoQuartillas aacute un Alma que padece soledad interiorraquo 7 hojas uacutetiles en 4ordm letra del siglo XVII Biblioteca Nacio-nal de Espantildea Manuscrito 1295828

En cuanto a su persona soacutelo se nos dice que laquose encubrioacute con este seudoacutenimo laquoSor Nadaraquo Esta monja desconocida de origen hispanoamericano posee toda la frescura e ingenuidad de una joven apasionada metida por vocacioacuten u obligacioacuten a ejercer la profesioacuten maacutes comuacuten para mujeres de cierta clase social de su tiempo En sus liacuteneas podemos encontrar un misticismo simple incluso en algunos momentos infantil pero a su vez lleno de una fuerza y sensualidad interior poco comuacuten en escritos de este geacute-nero que desborda los liacutemites del laquoamor divinoraquo a traveacutes de los diaacutelogos entre el Alma y el Esposo Sor Nada consigue proyectar su amor a Dios maacutes allaacute de una experiencia romaacutentica Su experiencia es sincera y genuinamente miacutestica trascendiendo la imita-cioacuten o la propia creacioacuten poeacutetica ficcionalizada (Hatzfeld 30) Algunos pasajes son de un

147 Veacutease mi artiacuteculo Sor Nada ardores divinos de una monja adolescente escritos ineacuteditos de una monja profesa del siglo XVIIraquo Espeacuteculo Revista de estudios literarios 26 (2004) 1-10 Universidad Complutense de Madrid http wwwucmesinfoespeculonumero26sornadahtml

170 JUAN FRANCISCO MAURA

alto contenido eroacutetico con sustantivos y metaacuteforas que recuerdan la maacutes iacutentima unioacuten amorosa en unos casos y el tierno amor maternal en otros

[T]e miro Jesus mio desnudo a las inclemencias del tiempo y ardien-do en puro fuego de Amor por la salud de las Almas y me ensentildeas a que te ame con todo mi corason y puresa de espiritu No atendiendo ni buscando umanos intereses ni a solisitar consuelos ni regalos espi-rituales que suelen empantildear la puresa del noble corason No mi Jesus amable pues antes me ensentildeaste tu puro Amor que desnudo sean [sic] de encaminar mis passos desde el pesebre asta la cuna en donde te miro tan desnudo como el pesebre y todo Sentildeor por mi Amor (Mss 12959 26 hoja 1 v)

El manuscrito (12959 27) de la mencionada serie de tres contiene algunas correccio-nes quizaacute hechas por el confesor o quizaacute por ella misma cuando se dirige con excesiva familiaridad y arrebatado fervor a su Amado148 He escogido el manuscrito (12959 Caja 28) en primer lugar por ser el ejemplo maacutes representativo de su poesiacutea y prosa En este manuscrito encontramos de forma maacutes directa que alegoacuterica toda la frescura de un diaacutelogo entre Jesuacutes y el alma que raya como diriacutea Cervantes laquoa la llana y sin rodeosraquo (667 lib 2 cap 38) con el doloroso y a veces desesperado deseo de la entrega y la unioacuten final con el Amado La ortografiacutea no ha sido corregida respetaacutendose el texto ori-ginal149 Veamos el siguiente fragmento

Mira que te amo con Amor de padre y con Amor de esposo el mas fino y puro enamorado que no tan solo me presio de darte mi mano sino tambien todo mi cuerpo y sangre para que con mi pan de vida te sustentes y te regales a tus anchuras y que con mi propio espiritu vivas en paz como tu lo deseas y que mis amores sean unico alivio en tus trabajos en esta mortal vida pues si esto es asi y sabes que muero por darte vida dime esposa mia de que te fatigas Dame querida tus bras-sos y dime si me amas como yo te amo (Hoja 4)

148 La antologiacutea de Promis ha procurado insertar entre los textos antoloacutegicos algunos que se refieren a la es-critura de mujeres fundamentalmente de aquellos generados en el interior de los espacios conventuales Estos textos se fundan como laquohistorias de vidasraquo y responden casi siempre a los requerimientos de los confesores de las monjas coloniales En este sentido resulta valiosiacutesima la incorporacioacuten de la llamada Relacioacuten autobiograacute-fica de Sor Ursula Suaacuterez como una muestra significativa de la escritura monjil entendida en esta eacutepoca (como tambieacuten en la tradicioacuten europea medieval) inserta en las denominadas laquolabores de manoraquo de las religiosas ya que el texto escrito por mandato se convertiacutea en una suerte de entramado o tejido linguumliacutestico es decir en un nuevo bordado que la mayor parte de las veces el confesor convertido en censor iba haciendo tachando y enmendando En la antologiacutea Promis agrega un texto de Sor Tadea Garciacutea de la Huerta titulado Relacioacuten de la inundacioacuten que hizo el riacuteo Mapocho de la ciudad de Santiago de Chile en el monasterio de Carmelitas titular de San Rafael el diacutea 16 de junio de 1783 se trata de un poema tipo romance escrito en versos octosilaacutebicos y que da cuenta de lo sucedido ese diacutea en el convento (Resentildea de la literatura del reino de Chile de Joseacute Promis Eddie Morales Pintildea httpwwwupaclpublicaciones2002literatura_promishtm)

149 Son frecuentes las faltas ortograacuteficas Una de ellas es el uso constante del seseo La ausencia de acentua-cioacuten y puntuacioacuten exceptuando alguacuten punto o coma arbitrario no seguido casi nunca de mayuacutescula inicial lo mismo que el uso igualmente aribitrario de la h o de b v r q g j m n x etc No olvidemos de la misma forma la laxitud linguumliacutestica existente en el siglo XVII (no sabemos a queacute parte de eacuteste pertenece el manuscrito) asiacute como la joven edad de la monja

171ESPANtildeOLAS DE ULTRAMAR EN LA HISTORIA Y EN LA LITERATURA

Los versos del presente manuscrito poseen la misma fuerza que tiene su prosa Con una estructura estroacutefica indefinida estaacuten aparentemente corregidos por alguien que tu-vo la oportunidad de conocer personalmente a la autora Muy probablemente se trate del padre al que hace referencia al principio del primer manuscrito laquoMandame el Pd que le declare en que consiste un verdadero amor a Diosraquo a continuacioacuten continuacutea con su caracteriacutestica humildad laquo[O]bedesere y dire lo q Dios me inspire segun mi rudesa y simplisidadraquo (Mss 12959 26) En cuanto a la fuerza pasional de esta joven observamos con cierta tristeza coacutemo aparece sublimada en sus escritos con toda la enegiacutea de una joven mujer llena de intensidad y vida pero encerrada en los liacutemites de un convento Veamos un ejemplo en donde responde el Alma en los siguientes versos

O mi enamorado Jesus O mi dulse y tierno amanteO alegria de los sielos O dulse Jesus amable

(Toda Sentildeor me derrito toda Sentildeor me desagoy quiero vivir por ti ea sentildeor abrasadme) [Tachado en el original]

Toda Sentildeor me derrito toda Sentildeor me desagoy quiero morir por vos ea Sentildeor que ya acabo

Ya tus amores me llaman ya tus perfumes me traencon suspiros y agonias Sentildeor hasta que te alcanse

O mi Jesus amoroso no puedo mas dilatarmeya la pasiensia me falta dulse Jesus abrasadme

(No puedo vivir sin vos no puedo mas dilatarmeya la pasiensia me falta dulse) [Tachado en el original]

No puedo vivir sin vos mi dulse Jesus amablepues me teneis echisada siendo mi esposo y mi Padre

Ay que me abraso Ay que me quemo del Amor deJesus nasareno como no tocan y tantildeen a fuego150

Estos versos llenos de arrebato sublimado conectan con toda la tradicioacuten miacutestica es-pantildeola que se remonta a Ramoacuten Llul y que culmina en el maacutes universal de nuestros

150 En toda la fuerza y simbologiacutea del amor maacutes iacutentimo del maacutes alto y sublime placer de la unioacuten de los amantes tal como lo encontramos en el Cantar de los Cantares y en San Juan de la Cruz Leemos en la Biblia

Ya me he quitado la tuacutenica iquestCoacutemo volver a vestirme Ya me he lavado los pies iquestCoacutemo volver a ensuciarlosMi amado metioacute su mano por el agujero (de la llave) y mis entrantildeas se estremecieron por eacutel Me levanteacute para abrir a mi amado Mis manos destilaron mirra y mis dedos mirra exquisita en el pestillo de la cerradura (5 3-5)

Nos ocurre lo mismo con San Juan de la Cruz en su insuperable poema laquoLlama de amor vivaraquo

iexclOh cauterio suaveiexclOh regalada llagaiexclOh mano blanda iexclOh toque delicadoque a vida eterna sabey toda deuda pagaMatando muerte en vida la has trocado

172 JUAN FRANCISCO MAURA

miacutesticos San Juan de la Cruz Esta tradicioacuten se extiende hasta finales del siglo XVII esto es hasta los finales del Barroco siendo un poco maacutes tardiacuteo en la Ameacuterica espantildeola Sin tener como propoacutesito discutir en el presente trabajo a queacute corriente miacutestica pertenece la obra de Sor Nada es necesario resaltar no obstante el hecho de que estaacute escrito por una mujer y ademaacutes de tierna edad El manuscrito 12959 Caja 26 termina con estas pa-labras laquo[T]odas estas boverias escrivi por entretenimiento siendo resien profesa en la religion Sor Nadaraquo Mas no por la juventud de su autora los escritos dejan de tener lo-gradas metaacuteforas imaacutegenes y siacutembolos sacados de la naturaleza La alegoriacutea de la unioacuten matrimonial poseeacute el fuego liacuterico de la maacutes apasionada de las relaciones amorosas vivi-ficada por perfumes flores insectos animales escarchas nieves o abrojos Por lo tanto aunque la narracioacuten destile cierta ingenuidad no carece por ello de un vocabulario rico con el sabor popular de la poesiacutea de los cancioneros y romances de tradicioacuten renacen-tista No ha sido otra mi intencioacuten que la de rescatar del olvido unos escritos en prosa y en verso llenos de frescura y espontaneidad que nos muestran la pasioacuten con que la joven novicia se laquoentrega en cuerpo y almaraquo a los menesteres de su profesioacuten guiada por un padre espiritual en esos primeros antildeos de formacioacuten Esta ha sido la razoacuten por la que presento a continuacioacuten el citado manuscrito en su totalidad

Sor Nada (Mss 1295928)

laquoEsplicacion sobre en que consiste la paz del AlmaraquolaquoQuartillas a un Alma que padece soledad interiorraquo

[7 hojas utiles en 4ordm letra del siglo XVII]

+

Esplicacion sobre en que consiste la paz del Alma

Pareseme segun mi rudo entender que la verdadera paz del Alma con-siste en una muy pura y buena consiencia en un corason liso y bien intensionado en una verdadera rectitud de espiritu en el qual el Alma procura bolar a Dios sin jamas detenerse a respetos umanos ni reparar en que me diran ni de que me censuraran sino me apresuro a seguir a unos entenderes y pareseres dorados en los quales pretende el mundo engantildear y ensuciar si se puede la puresa de un corason unicamente de Dios y de su Santa ley y se lo conserva cristalino con la divina asis-tencia de la gracia y comprendido de su Amor y temor siguiendo la luz divina de tan amante Sentildeor Dios y ombre verdadero con que este ilustrado corason ni se altera ni se mueve por los disfrasses dorados que ase el mundo y sus moradores mayormente con falssas amistades aunque con ellos muestre buena intension Con la misma grasia y luz de Dios conose el buen corason estos disfrasses que le ase el mundo y se retira de todo con espiritu y valor esto sin la menor alterasion sino que en suma paz se retira a buscar a Dios dentro de su mismo corason

173ESPANtildeOLAS DE ULTRAMAR EN LA HISTORIA Y EN LA LITERATURA

y se abrasa con su pura verdad en la qual se le descubren mil interio-res secretos tan solidos puros y verdaderos que la misma Alma queda abismada y de puro grandes no los puede bien comprender ni esplicar pero estos mismos secretos divinos le sirven de espuelas para no solo correr sino bolar con pies de plumas en seguimiento de su bien ama-do Jesus y como este soberano Sentildeor es tan amante de sus espossas las Almas luego que la ve bolar con pies de plumas la sale al encuen-tro en despoblado campo que se deve de llamar Campo de Amor de Dios y el mismo Sentildeor se viene a las manos por ser Dios que nos ama con Amor infinito de Padre benigno y amoroso con que asiendose en contra deso este divino enamorado en lo interyor de el Alma que le busca con ansias de servirle y amarle y en aquella soledad traban una conversasion amorosa y sensilla como la pluma simple de quien esto escrive

Divino enquentroDios y el Alma en la soledad

O Soberano Principe de la paz dise el Alma tus perfumes me traen a ti bolando porque alla en el mundo y sus valedores me pretendian engantildear y entretenerme con pegaminossas amistades que facilmen-te me pudieran envenenar y matarme apartandome de ti Mi dulse Jesus amable mi Redentor Soberano que con tantas ansias me sales al enquentro como siervo [ciervo] erido de mis Amores los quales tu Amor me ofrese para que con tu mismo Amor te ame y te sirva en paz sin perturbarme ni contristarme ni cansarme de padeser pasando si se ofrese por escarchas nieves espinas ni abrojos ni por otros diverssos trabajos ni piedras de contradision que tu me puedes permitir pues por mas que el mar se levante con sus ferosses olas contra mi ni piedras se me tiren al rostro en todo Sentildeor me quieres con serenidad pasifica sin la menor perturbasion Todo Sentildeor quieres que lo tome con Serenidad de espiritu y asi vengo a ti bolando para que mejor me ensentildees a vivir segun las leyes de tu noble condision que me son muy agradables por mas que el mundo me las despresie por segir sus vanidades y torsidas intensiones con apariensias de bien y con este engantildeo y bien me quie-ro mas a mi que no a mi proximo veo que segun mi pareser se pierden muchas Almas y tambien de aquellos que se depresian y pasan por muy espirituales Con que me paresen pocos los que llegan a padeser con desnudes151 de espiritu por tu purisimo Amor y me parese essas se quedan muy atrasadas en la virtud por el peligro de bolver muy atras el paso de modo que se pueden despentildear y pereser en su misma desgra-sia ya por soberbia o por otras enfermedades que se les pega al corason y asi lo pasan como siegos ignorantes sin advertir en sus peligros

151 La letra en cursiva es miacutea

174 JUAN FRANCISCO MAURA

este aquerdo Sentildeor y otros que tu verdad me ensentildea me ase venir uyendo de las paredes del mundo y me vengo a ti Dios mio bolando con las dos Alas del Amor y temor que tu mismo Amor me ofrese tan de gracia y tan de grado que no se duentildeo mio con que lo responder a tan soberano beneficio y finesa de tus entrantildeas de Amorvengo Sentildeor y esposo mio unicamente a descansar en ti pues los peli-gros del camino me an puesto en mucho sobresalto temiendo el per-derte y sin ti perderme para siempre por una eternidad sin fin pues deseo amado mio ganarme ganandote a ti y vivir en ti aora en vida y despues eternamente y estos cuidados me traen fatigada molida y cansada y no podre tener alivio y descanso sino viendome entre tus brassos aunque sea estando en cruz pues ese es el fin de mis deseos vivir y morir en ti ablame mi cordero manso y ensentildeame a que ver-daderamente te ame como fiel esposa ea mi caro amigo dame la ma-no pues sabes Amor mio que en mi no ay mano sin tu misma mano y asi mi Dios y Sentildeor mi Principe Soberano con umilde rendimiento y deseos de alcansarte te suplico me des la mano y me consueles en estos mis trabajos Deseo Sentildeor vivir en paz y los malos amores de mi Naturaleza flaca no me dejan detentar y no quieren por mi desgrasia atropellar con las leyes de tu Amor ni quisiera perturbar mi corason quando me veo con un torvellino de olas y contratiempos que a menu-do me suelen sercar pero si tu Sentildeor me das la mano nada temo sino que me aseguro y vivire en paz sin que me fatiguen los contratiempos pues mi mano en la tuya y mi espiritu en el tuyo por mas borrascas que me envistan no seran bastantes para rendir mi voluntad a la suya bien si para pronunsiar un fiat que resuene bien atras en tus oidos y que en medio de mis fatigas me ponga a cantar tus divinas misericor-dias hea Sentildeor ya pretendo serrar mis labios por no desir mas bove-rias y deseo Sentildeor oir tus palabras de vida eterna abla Sentildeor que tu sierva oye con atension y cuydado mira mi Dios que se me ase tarde y espero con prisa deseando saborearme y aprovecharme de los ecos de tu Santa dotrina pues todas tus palabras saben a eterna vida callen pues mis sentidos y potensias y todo se ponga en paz pues mi dulse y soberano Sentildeor no se escusara de ablar me aun que en mudo silensio hea mi gran Prinsipe de la paz ablame que tus puros amores me traen perdida por estos asperos montes y mis cortos pasos no te pueden dar alcanse mirame mi Dios a tus pies postrada como un vil gusano y me-nor ormiga de la tierraabla Jesus y dise a su esposa el Alma querida esposa mia que me pides y por que te muestras tan fatigada y mal sufrida no vives como corde-rita del campo buscando de mis pechos el sustancial pasto mi Amor no te sustenta y mi grasia te promete eterna vida pues dime amada de que te fatigas y te muestras mal sufrida mira que te amo con Amor de padre y con Amor de esposo el mas fino y puro enamorado que no tan solo me presio de darte mi mano sino tambien todo mi cuerpo y

175ESPANtildeOLAS DE ULTRAMAR EN LA HISTORIA Y EN LA LITERATURA

sangre para que con mi pan de vida te sustentes y te regales a tus an-churas y que con mi propio espiritu vivas en paz como tu lo deseas y que mis amores sean unico alivio en tus trabajos en esta mortal vida pues si esto es asi y sabes que muero por darte vida dime esposa mia de que te fatigas Dame querida tus brassos y dime si me amas como yo te amoResponde el Alma152 Tu mi Dios sabes si yo te amo pues de mi solo se que mis deseos y ansias buelan a ti mas no alcanso a saber si te amo como tu de-seas ser amado y como desconfio tanto de mi y de mis prosederes falssos temo Dios mio perderme y perderte y asi Sentildeor pues no desechas mis Amores y te muestras tan fino en amarme te pido me ensentildees a vivir segun las leyes de tu pura verdad y fina condisionhija mia dise Dios la prueva de un verdadero Amor consiste en sufrir callar y padeser por mi unico Amor y en todo seguir mis pasos sin ja-mas retroseder por mas fragoso que se muestre el camino pues nunca seran tantas las espinas las escarchas ni las nieves ni los vientos bo-rrascosos que te se ofrescan pasar por mi Amor como los que mi tierno y desinteresado Amor paso por ti y siempre con mis pies descalssos y asi hija y esposa mia muestrate costante en seguir lo perfecto de mis passos pues mi braso fuerte sera en ti y peleara por ti y te sera el todo en tus nesesidades y mi Amor te convertira en dulse y suave lo amargo y molesto a la condision de la carrne

Responde el Alma

O mi enamorado Jesus O mi dulse y tierno amanteO alegria de los sielos O dulse Jesus amable

(Toda Sentildeor me derrito toda Sentildeor me desagoy quiero vivir por ti ea sentildeor abrasadme) [Tachado en el original]

Toda Sentildeor me derrito toda Sentildeor me desagoy quiero morir por vos ea Sentildeor que ya acabo

Ya tus amores me llaman ya tus perfumes me traencon suspiros y agonias Sentildeor asta que te alcanse

O mi Jesus amoroso no puedo mas dilatarmeya la pasiensia me falta dulse Jesus abrasadme

(No puedo vivir sin vos no puedo mas dilatarmeya la pasiensia me falta dulse) [Tachado en el original]

No puedo vivir sin vos mi dulse Jesus amablepues me teneis echisada siendo mi esposo y mi Padre

152 La aparicioacuten de una mayuacutescula al principio de una oracioacuten es algo totalmente arbitrario en este ma-nuscrito dada la libertad ortograacutefica de la autora Como se puede observar en la mayor parte de las veces no es el caso

176 JUAN FRANCISCO MAURA

Ay que me abraso Ay que me quemo del Amor deJesus nasareno como no tocan y tantildeen a fuego

Responde Jesus Hija mia tus simples vozes oygo y aunque resuenan bien a mis oidos pero te deseo mas mansa y pasifica en tus fervores ya sabes que no siempre as de vivir en mantillas ni a los pechos de tu Madre por que es rason que padescas con espiritu fuerte como mu-jer valerosa por que a una esposa del Rey soberano y prinsipe de la paz no le estan bien chiquerias ni fervores de nintildea malcriada y ya es ora que la destete su Madre la Naturaleza y que empesando su nueva vida camine con el favor de mi grasia sigiendo mis passos de eterna vida esto con sus pies descalssos segun mis leyes de Amor puro y desinteresado lo tienen ordenado153 y vivir en paz como lo deje en-cargado a mis apostoles Santos repitiendoles varias vezes Vivir en pas y caridad esto es un vivir en Dios y Dios en el Alma y asi hija mia el Alma que vive en paz vive en mi Como mis cortesanos en el cielo y pues me pides que te ensentildee a vivir segun las leyes de mi condision Repito el desir que te debes mostrar sufrida en todo tiempo y estado sin permitir en tu corason que ni aun los fervores se adelanten con estremos ni ademanes sino atiende y aprende de mi purisima Madre pues siempre la veras si bien lo consideras que mientras vivio en el mundo en todos sus trabajos se mostro firme fuerte costante como piedra diamante Pues mirandome nintildeo entre sus brasos desnudo en el pesebre desnudo y crusificado en los brassos de una cruz En estos y otros passos no se mudo su rostro sino que en suma serenidad y pasifico corason toda se sacrificaba enteramente en los brassos de mi Amor y rendido su corason y voluntad en la de mi eterno Padre por ejemplo te la doy y deseo que aprendas de sus nobles calidades pues te aseguro carisima que las leyes de mi condision y pura verdad todo lo allaras enserrado en el corason de mi purisima Madre sedle fiel y descansaras en paz

+

Quartillas a un alma que padese soledad interior

1Un Alma afligida y tristese ve en un campo desiertay en el su esposo la tieneAtormentada y sedienta

153 Es a traveacutes de estas liacuteneas lo que hace suponer que la autora de este diaacutelogo amoroso entre el Alma y Je-suacutes es novicia esto es laquoque estaacute empesando su nueva vidaraquo En las mismas liacuteneas una vez maacutes se hace alusioacuten al laquodesteteraquo de su vida civil laquoa una esposa del Rey soberano y principe de la paz no le estan bien chiquerias ni fervores de nintildea malcriada y ya es ora que la destete su Madre la naturalesaraquo (fol 5)

177ESPANtildeOLAS DE ULTRAMAR EN LA HISTORIA Y EN LA LITERATURA

2Pendiente se ve en el AyreSolo un hilo la sustentasin tocar el pie en el sueloporque del no tome tierra

3Mirandola esta yto a ytoaquel sol que la atraviesay la enviste con sus rayosmas ella no pestantildeea

4Como sigarra padese y como a tal se atormentabatiendo sus mismas Alasy el corason se atraviesa

5Con penas sustos temoresquando se mira assi mesmasin tener valor en nadaporque es la misma flaquesa

6Pero el Amor de su esposotoda su atension le llevay la pone en un abismopero cubierto en tiniebla

7Desea dar algun bueloy subir con ligeresapero se mira travadacon una fuerte cadena

8Clama suspira y padeseMas del todo se sujetaRindiendo su voluntadA la divina clemencia

9Los enemigos del AlmaCruelmente le asen guerray ella aunque firme y constantelos reselos la atormentan

178 JUAN FRANCISCO MAURA

10de todos modos padeseaunque gosa la asistensiadel divino esposo amadoque en su interior se recrea

11Solo de verla penary con verla tan serenadise resibe mil gustosde su sigarra pequentildea

12Le sabe el mundo a mil yelesy su trato le atormentaviendo en el mil falsedadesque todas saben a tierra

13Para poderse librardeja de correr y buelacon las Alas del Amory el mismo Amor se la lleva

Una vida dedicada a un amor divino un amor que le haraacute llenar un buen nuacutemero de cuartillas dedicadas a tan alta empresa Se desconoce si la vocacioacuten de Sor Nada con-tinuoacute con tanta intensidad el resto de sus diacuteas Ciertamente la vida en el covento no era faacutecil En algunos casos la experiencia era traumaacutetica incluso fatal para algunas de las adolescentes de la Ameacuterica Espantildeola Las reglas del claustro eran severas por varias razones Estas joacutevenes si no teniacutean el permiso de la superiora no podiacutean recibir visitas no podiacutean volver a sus casas su correspondencia era censuraba y no podiacutean salir del periacutemetro conventual Igualmente se levantaban antes del amanecer para oir misa tra-bajaban el resto del diacutea y lo maacutes interesante es que muchas veces esta vida era aceptada por muchas

Page 5: Tercera parte: Mujeres en la vida intelectual - …parnaseo.uv.es/Editorial/Maura/TerceraParte.pdf · La Biblia, por su parte, hace repetidas menciones de la mujer y sobre el comporta-

135ESPANtildeOLAS DE ULTRAMAR EN LA HISTORIA Y EN LA LITERATURA

con toda desverguumlenzaTeniacutea que ofrecer un sacri-ficio y hoy he cumplido ya mis votosPor eso te he salido al encuentro iba en busca de ti y aho-ra te halloHe ataviado el lecho con ta-pices con telas de hilo recamadode EgiptoHe perfumado mi caacutemaracon mirra aacuteloe y cinaacutemonoVen embriageacutemonos deamores hasta la mantildeana harteacute- monos de cariciasPues mi marido no estaacute encasa ha salido para un largoviajeSe ha llevado la bolsa y no volveraacute hasta el plenilunioCon la suavidad de sus pala-bras le rindioacute y con sus halagos le sedujoY se fue tras ella entonteci-do como buey que se lleva almatadero como ciervo cogido enel lazoHasta que una flecha le atra-viesa el hiacutegado o como paacutejaro que se precipita en la red sin saber que le va en ello la vida (Proverbios 7 9-24)

El laquopobre paacutejaroraquo cayoacute en la red hipnotizado por la serpiente Desde el laquoGeacutenesisraquo hasta laquoMalaquiacuteasraquo esto es desde el principio al fin del Antiguo Testamento se puede apreciar en menor o mayor grado la misoginia cararacteriacutestica de una sociedad pa-triarcal Seriacutea prolijo citar todos aquellos pasajes donde esto se confirma siendo tal vez los siguientes algunos de los maacutes representativos laquoEl varoacuten no debe cubrir la cabeza porque es imagen y gloria de Dios mas la mujer es gloria del varoacuten pues no procede el varoacuten de la mujer sino la mujer del varoacuten ni fue creado el varoacuten para la mujer sino la mujer para el varoacutenraquo (Corintios 11 7-10) El proacuteximo fragmento hace referencia a la laquomujer disolutaraquo Para que te guarden de la mala mujer de los alagos de la mujer ajena No codicies su hermosura en tu corazoacuten no te dejes seducir por sus miradas Porque si la prostituta busca un pedazo de pan la casada va a la caza de una vida preciosa iquestPuede llevar uno fuego en su regazo sin quemarse los vestidos (Proverbios 6 24-28)

136 JUAN FRANCISCO MAURA

No es difiacutecil imaginar la repercusioacuten de esta argumentacioacuten si se hace de ella una inter-pretacioacuten literal sobre todo ante un pueblo de mayoriacutea analfabeta o poco instruida

Claro estaacute que seriacutea absurdo querer hacer un anaacutelisis literal de las palabras de las laquoSa-gradas Escriturasraquo Sin embargo eacutestas han influido e influyen en la sociedad occidental a un nivel maacutes elevado de lo que comuacutenmente se piensa a veces de manera incons-ciente De cualquier manera sin entrar en una comparacioacuten teoloacutegica entre el Yaveacute del Antiguo Testamento y Jesucristo en el Nuevo Testamento la diferencia que se hace del elemento femenino entre estos dos libros es laquonotableraquo Dice Yaveacute a Sauacutel laquoNo perdones mata a hombres mujeres y nintildeos aun los de pecho bueyes y ovejas camellos y asnosraquo Forma de pensar eacutesta que no concuerda con el laquoamor al proacutejimoraquo del Nuevo Testamen-to donde la venganza y el odio pasan a ser amor y resignacioacuten

En la Edad Media espantildeola existieron algunas leyes que teniendo como objeto a la mujer dejan entrever el derecho y las limitaciones con que eacutestas contaban en caso de abuso por parte de los hombres Un ejemplo de estos derechos o laquofuerosraquo podiacutean ser muy bien los de Jaca otorgados en el antildeo de 1077 por el rey Sancho Ramiacuterez Estos fueros en opinioacuten de Antonio Ubieto Arteta laquose extendieron a muchas poblaciones de Espantildearaquo Veacuteanse las siguientes claacuteusulas laquoK) Si alguien faltase con mujer con el consen-timiento de ella no siendo casada no pagariacutea multa pero si usase violencia deberiacutea tomarla por esposa o proporcionarle marido L) La mujer ultrajada deberaacute pedir justicia en los dos primeros diacuteas inmediatos a su deshonra presentando testigos Si pasan los tres primeros diacuteas sin reclamar ya no tendraacute derecho (Ubieto 135-36)

Observar el desarrollo que fue teniendo el papel de la mujer dentro de la sociedad especialmente de la espantildeola resulta sin duda interesante desde un punto de vista so-cioloacutegico Gracias a ello podremos comprender mucho mejor el posterior desarrollo de su participacioacuten en los acontecimientos de la eacutepoca que las tocoacute vivir y su posterior proyeccioacuten en el Nuevo Mundo siempre teniendo en cuenta el margen maacutes o menos estrecho que la Iglesia Catoacutelica y la mentalidad de la eacutepoca impusieron en mayor o menor grado a lo largo de diferentes periacuteodos Es por eso por lo que debemos indagar maacutes profundamente en todo lo relacionado con la actuacioacuten de la mujer en tierras de ultramar y sobre todo valorar sus acciones no como hechos marginales y esporaacutedicos sino como la base y los cimientos de una sociedad que todaviacutea sigue viva Son las voces de estas mujeres aquellas que se han podido rescatar el mejor testimonio Fueron las madres de los espantildeoles del siglo XVI dice Fernaacutendez Duro las que hicieron posible que en tan corto nuacutemero de antildeos se hiciese un derroche tan formidable de energiacutea en todos los mares y continentes de nuestro planeta

iexclQueacute grandeza queacute arrojo el de Espantildea en el siglo XVI Jamaacutes vio el Mundo energiacutea actividad y fortuna semejantes Para los espantildeoles no habiacutea obstaacuteculos en los riacuteos en las montantildeas ni en los desiertos Jun-taacutebanse unos cuantos creaban escuadras conquistaban imperios y fundando ciudades discurriacutean el modo de unir los mares y los climas Diriacutease que eran de procedencia de gigantes o de semidioses Eraneran hijos de tales madres (Duro 26)

Garcilaso de la Vega El Inca (1536-1616) cronista peruano hijo de un capitaacuten espantildeol y de una princesa inca tambieacuten se hace eco en su obra Historia general del Peruacute (segunda parte de sus Comentarios Reales) de la opinioacuten de algunas sentildeoritas que pasaron al Nuevo

137ESPANtildeOLAS DE ULTRAMAR EN LA HISTORIA Y EN LA LITERATURA

Mundo con la idea de encontrar al hombre de sus suentildeos en este caso al conquistador llevaacutendose una gran sorpresa al comprobar coacutemo las heridas las inclemencias del tiem-po y las enfermedades habiacutean dejado sus huellas en los rostros de estos hombres que no eran como se los imaginaban Este fue el comentario de una de las doncellas casade-ras que llevoacute don Pedro de Alvarado a Guatemala

iquestDicen que nos hemos de casar con estos conquistadores dixo una dixo otra iquestcon estos viejos podridos nos habiacuteamos de casar caacutesese quien quisiere que yo por cierto no pienso casar con ninguno dellos dolos al diablo parece que escaparon del infierno seguacuten estaacuten de estro-peados Unos cojos otros mancos otros sin orejas otros con un ojo otros con media cara y el mejor librado la tiene una dos y tres vecesraquo Dijo la primera laquoNo hemos de casar con ellos por su gentileza sino por heredar los indios que tienen que seguacuten estaacuten de viejos y cansados se han de morir presto y entonces podremos escoger el mozo que qui-sieacuteremos en lugar del viejo como suelen trocar una caldera vieja y rota por otra sana y nueva (Garcilaso vol 2 lib 2 cap 1 80)

Al escuchar estas palabras un caballero que se encontraba al otro lado de la cortina donde estaban hablando no pudieacutendolo sufrir maacutes las afrentoacute pasando luego a decir-les a los caballeros los laquobuenos deseosraquo de las damas Se marchoacute a su casa llamoacute a un cura y se casoacute con una india con la que ya teniacutea dos hijos a los que legitimoacute para que no pasasen a ser esclavos o criados de ninguna de esas sentildeoras (Garcilaso vol 2 lib 2 cap 1 81)

Muchas de estas primeras mujeres pasaron a ser viudas varias veces a causa precisa-mente de la muerte del marido en las diferentes campantildeas de los primeros antildeos

Fueron las descendientes de las mujeres que vinieron con los conquistadores las que de una manera definitiva asentaron las raiacuteces de una nueva sociedad que llegariacutea al mismo esplendor y refinamiento que la de la metroacutepoli El trasplante ya estaba realiza-do La violencia del laquoencuentroraquo de los primeros antildeos habiacutea dado como fruto una nueva sociedad que habiacutea heredado las bases de la cultura espantildeola y que teniacutea ademaacutes todo el encanto y riqueza de las variadiacutesimas culturas precolombinas

La primera generacioacuten corresponde ya a la mujer criolla hija de pobla-dora aquella que educoacute a los hijos propios y a los ajenos suavizando las costumbres baacuterbaras de la eacutepoca belicista Lo cierto es que a pesar de todas las vicisitudes la mujer hizo posible la creacioacuten del hogar en el que se fraguoacute la transculturacioacuten la sociedad gracias a su presencia fue perdiendo vulgaridad hasta alcanzar un notorio refinamiento Aun-que la paz tardoacute en llegar las treguas favorecieron el asiento en villas y ciudades En ellas florecioacute el romancero y la copla medieval junto a la arquitectura goacutetica el balcoacuten canario y el patio andaluz (Borges 436)

Ya fuese en la ciudad de Meacutexico o en la de Lima la mujer criolla gustaba de todas aquellas sofisticaciones que podiacutean disfrutar las mujeres de Sevilla o de la corte To-das teniacutean ademaacutes criados A mediados del siglo XVI empezaraacuten las navegaciones en-tre Meacutejico y las Filipinas lo que contribuiraacute a enriquecer los atuendos de las mujeres criollas asiacute como espantildeolas con artiacuteculos tan exoacuteticos en su diacutea pero tan castizos hoy

138 JUAN FRANCISCO MAURA

como el mantoacuten de Manila o el abanico Fray Reginal de Lizaacuterraga dice sobre las mu-jeres del Peruacute

La criolla es ademaacutes mujer que gusta de la ostentacioacuten y del lujo vi-cios muy femeninos que en parte la compensaban de pasadas o futu-ras calamidades En el Peruacute el vestuario se hizo tan ostentoso laquoque casi no se sabe coacutemo lo pueden sufrir los maridosraquo La soberbia de ellas es demasiada y no sabemos en lo que ha de parar no creo que hay en lo descubierto del mundo ciudad en su tanto ni cuatro veces mayor que a tanta soberbia en este particular como esta nuestra ciudad llegueCon justo tiacutetulo se podriacutea moderar por los virreyes esta soberbia Pe-ro no seacute por queacute no se modera y siacute seacute por queacute ni los maridos tienen aacutenimo para moderarlo ni los gobernadores tampoco (Lizaacuterraga 38 lib 1 cap 51)

La mujer criolla participa en todos los aconteceres de su sociedad Estaacute presente en todos los acontecimientos sociales y con frecuencia econoacutemicos sin dejar por ello de controlar la vida del hogar Al igual que en Espantildea ellas se encargaraacuten de casar a sus hijas e hijos unos destinados a mantener la tradicioacuten familiar y enriquecerla otros a engrosar las filas de la iglesia

Mujeres en la vida intelectual espantildeola durante los siglos XVI y XVII131

Great genuine and extraordinary work can be done only in so far as its author disregard the method the thoughts the opinions of his contemporaries and quietly works on in spite of their criticism on his side despising what they praise No one becomes great without arrogance of this sort (Shopenhauer The Art of Literature)

De igual manera que se ha querido excluir a la mujer de las primeras paacuteginas del encuentro con el Nuevo Mundo otro tanto ha ocurrido con la labor intelectual de tan insignes mujeres Muchas pese a lo remoto de sus asentamientos lograron dar a luz los maacutes valiosos frutos de la poesiacutea liacuterica de su tiempo132 Un gran nuacutemero de estas mujeres dada la estratificacioacuten social de su eacutepoca desarrolloacute su labor en conventos Otras sin embargo hicieron lo mismo compaginando sus vidas matrimoniales con las tareas culturales La vida monacal daba ventaja en cierta forma a la hora de conseguir la independencia deseada para dedicarse por completo al mundo de las letras sin que un

131 Veacutease mi artiacuteculo laquoCara y cruz de la mujer hispana imaacutegenes del siglo XVIraquo132 Veacutease el ejemplo de Mariacutea de Alvarado la Amarilis de Lope de Vega que escribioacute su obra en los maacutes

apartados rincones de los Andes peruanos Veacutease Meneacutendez y Pelayo Marcelino Historia de la Poesiacutea Hispano-Americana 84

139ESPANtildeOLAS DE ULTRAMAR EN LA HISTORIA Y EN LA LITERATURA

marido o unos hijos se interpusiesen en el tiempo concentracioacuten y dedicacioacuten que una actividad artiacutestica requiere Pese a todo no siempre fue asiacute El maacutes conocido ejemplo lo tendriacuteamos en Sor Juana Ineacutes de la Cruz la cual tuvo que sufrir problemas con algunos altos cargos eclesiaacutesticos asiacute como envidias de propios y extrantildeos por ser entre otras cosas superior en inteligencia y cultura a la mayor parte de sus contemporaacuteneos

Muchos conventos estaban bien provistos de libros a menudo donados por aquellas familias que teniacutean alguacuten miembro dentro del convento o simplemente por simpati-zantes de las diferentes oacuterdenes religiosas En la paz del claustro algunas de estas mu-jeres llegaron a adquirir un formidable desarrollo intelectual Pero a pesar de la calidad del material que existe sobre tan insignes mujeres se las ha preferido mantener en la oscuridad Como deciacutea con ironiacutea el pensador espantildeol Benito Feijoacuteo (1676-1764) sobre las disputas entre hombres y mujeres laquoLo cierto es que ni ellas ni nosotros podemos en este pleito ser jueces porque somos partes y asiacute se habiacutea de fiar la sentencia a los aacutengeles que como no tienen sexo son indiferentesraquo (46)

El escritor argentino Vicente G Quesada ya se quejaba a principios del presente si-glo de la pobriacutesima informacioacuten que ofreciacutea la enciclopedia francesa Larousse sobre la vida colonial en Meacutexico cuando refirieacutendose a eacutesta deciacutea lo siguiente laquoLos uacutenicos libros que se conociacutean eran el almanaque el catecismo del P Ripalda el Antildeo cristiano la vida de los santos y otros de ese geacuteneroraquo (Quesada 125) El mismo autor refutando lo anterior escribe

Por uacuteltimo recordareacute la notabiliacutesima publicacioacuten moderna La Bibliogra-fiacutea mejicana del siglo XVI eruditiacutesima y que constituye el maacutes concluyen-te testimonio para desautorizar la ligereza del Dictionnaire de Larousse que afirma lo que ignoraEl celebrado escritor mejicano don Francisco Pimentel ha publicado su erudita obra Historia criacutetica de la literatura y las ciencias en Meacutejico desde la conquista hasta nuestros diacuteas es un trabajo que comprende cuatro partes divididas asiacute Novelistas oradores historiadores y autores cientiacuteficos Por esta breve relacioacuten se comprende que es temeridad indisculpable pretender dar noticias del movimiento intelectual en el virreinato de Meacutejico sin conocer las obras de Pimentel y de Garciacutea Icaz-balceta ni la edicioacuten primitiva o corregida de Beristain (126)

En los maacutes importantes nuacutecleos urbanos de Meacutexico y Peruacute se podiacutea apreciar clara-mente la participacioacuten directa de la mujer en las maacutes diversas actividades sociales y cul-turales Esta participacioacuten llegoacute incluso al extremo de algunas mujeres que insultaron li-teralmente a las autoridades competentes cuando lo creyeron necesario laquoEstas mujeres que lloran seriacutean las mismas que creyeron como causa principal de aquellas muertes las disposiciones de las Leyes Nuevas porque no tuvieron empacho de insultar al virrey Blasco Nuacutentildeez Vela a quien lsquodieron gritasrsquo (sic) las espantildeolas y lo maldijeron como si llevara consigo la ira de Diosraquo (Borges 52) Lo mismo ocurre en la peniacutensula Dentro del plano cultural durante la primera mitad del siglo XVII destacaraacute entre los escritores de su tiempo Mariacutea de Zayas y Sotomayor gran novelista y defensora de los atributos de su sexo cuya obra narrativa y dramaacutetica disfrutoacute de una gran popularidad en la peniacuten-sula asiacute como en Hispano-Ameacuterica laquoCasi no ha habido novelista maacutes simpaacutetico a los lectores espantildeoles que Dontildea Mariacutea de Zayas seguacuten las muchas reimpresiones que se han hecho de sus obrasraquo (E Fernaacutendez de Navarrete xcvii) Entre sus admiradores contoacute

140 JUAN FRANCISCO MAURA

con el infatigable y genial Lope de Vega que la elogioacute en su obra El laurel de Apolo laquoNo desaprovechoacute Dontildea Mariacutea ninguna ocasioacuten de abogar por las mujeres contra la tiraniacutea de los hombres suponiendo que como deacutespotas las quieren ignorantes para tenerlas sujetasraquo (E Fernaacutendez de Navarrete xcvi)

Pero no tiene que ser exclusivamente una mujer la que defienda los atributos y los derechos de su sexo Se podriacutean citar varios ejemplos donde desde los inicios de las letras espantildeolas la mujer aparece comprendida e incluso defendida por escritores con-temporaacuteneos Veacuteanse los siguientes versos escritos en el siglo XIV por el genial Arcipres-te de Hita

Mujeres abrid los oiacutedos y escuchad una buena leccioacuten escuchad estas palabras guardaos del varoacuteniexclGuardaos no os acaezca como el leoacutenal asno sin orejas y sin su corazoacuten(892)133

No se puede despreciar la influencia que tuvo en la Espantildea del siglo XVI Erasmo de Roacutetterdam el intelectual maacutes reputado de su tiempo Erasmo con una clarividencia mental poco comuacuten trata de los temas maacutes cotidianos asiacute como de los maacutes profun-dos Sus escritos siempre al borde de lo hereacutetico dejaron bien claro su independencia ideoloacutegica Tambieacuten supo dar su opinioacuten sobre las mujeres y de la importancia que una buena educacioacuten supondriacutea a la hora de llevar a cabo las tareas diarias

With regard to female education Erasmus is unequivocal In Abbatis et eruditae he categorically states that education and learning are as desirable in a woman as in a man And although there is naturally no suggestion that the education and learning should be directed towards a career there are no carping restrictions as to what the education should consist of or where the learning should end (McKendrick 9)

Fue una mujer en particular la que llamoacute la atencioacuten del erudito holandeacutes Catalina de Aragoacuten hija de Isabel la Catoacutelica Grandes debieron ser las virtudes de esta dama cuando tan renombrados laquolibrepensadoresraquo la calificaban como laquomilagro del aprendi-zaje femeninoraquo

At the centre of the movement was a Spanish woman Catherine of Aragon first wife of Henry VIII of England Her mother Isabel la Catoacutelica had made sure that Catherine and her sisters received an advanced and enlightened education under two eminent Italian hu-manists Antonio and Alessandro Geraldini and Catherine herself was considered by Erasmus and Sir Thomas Moore to be a miracle of fe-male learning At her request Juan Luis Vives between 1524 and 1528 wrote his De institutione feminae christianae for her daughter Mary and he dedicated it to Catherine (McKendrick 6)

La pobre Catalina ya presagiaba su triste final Existe una dramaacutetica y muy poco co-nocida carta conservada en la Academia de la Historia donde eacutesta escribe a su sobrino el emperador Carlos V pidieacutendole ayuda y proteccioacuten a su desesperada situacioacuten en Inglaterra

133 Juan Ruiz Libro de Buen Amor 193

141ESPANtildeOLAS DE ULTRAMAR EN LA HISTORIA Y EN LA LITERATURA

Muy alto y poderoso sentildeor por las letras que a vuestra magestad e escrito a visto el tenor que siempre en este my negocio e tenido agora que veo el peligro que tanto tiempo lo e esperado torno a suplicar lo mismo que asta agora e echo y es que por permisioacuten de dios y por el deudo y sangre que entre vuestra magestad y my ay quiero de vos es-pecial memoria del peligro en que estoy y de los ynconvenientes que se espera allende que dios muy grande mire para ofendido si el Rey my sentildeor pone en efecto lo que todo este reyno tome en este parlamento de todo lo que para estar informado vuestra magestad por su embaxa-dor que aquiacute reside para el remedio tengo esperanza en dios bastaraacute lo que vuestra alteza proveeraacute conque se aga con tiempo no tengo maacutes que decir sino que todo ese reyno y maacutes los perlados y doctas personas que en esta causa defienden estaacuten muy sentidos de la dilacioacuten que su santidad del papa en este negocio a dado y quexanse mucho dello pues por vuestra parte nunca sino justicia se le a demandado y estaacuten el diacutea de oy tan firmes como asta agora para averlo de declarar donde fueren y debe ser entyendese esto poniendo la question como puacuteblicamente se platica que para en lo secreto no ay necesidad de ablar en ello y crea vuestra magestad de que esta verdad y dios me sostienen porque para proseguir mis trabajos no vastaraacute cuerpo humano y confiando en eacutel le suplico guarde la vida de vuestra magestad y acreciente su estado como yo deseo Degramache a 11 de enero= Humilde tiacutea de vuestra magestad= Catalina (RAH Atoacutegrafo precioso Caja 3 Nuacutem 23 Dontildea Catalina de Aragoacuten Reina de Inglaterra Antildeo 1530 Carta al emperador Carlos V pidieacutendole proteccioacuten)

La pobre Catalina presagiaba su triste fin ya que seis antildeos despueacutes la que fuera hija menor de los Reyes Catoacutelicos pasariacutea a mejor vida El no haber podido dar un hijo he-redero al rey Enrique VIII hizo que eacuteste se casase con Ana Bolena declarando nulo su matrimonio anterior sin consentimiento del Papa Roma le excomulgoacute pero eacutel mismo se proclamoacute jefe de la iglesia anglicana A pesar de todo Catalina muere enamorada de su marido y estas uacuteltimas liacuteneas con las que termina su uacuteltima carta y su vida son sufi-cientemente expliacutecitas laquoJuro que sobre todas las cosas mis ojos desean volver a verosraquo (Ximeacutenez de Sandoval 131)

Pese a la enorme influencia directa o indirecta que Erasmo tuviese sobre los pensado-res de la Espantildea del siglo XVI no debemos dejar de destacar tambieacuten la de Fray Luis de Leoacuten tanto por su cariz independiente como por ser un defensor de la libertad indivi-dual Auacuten siendo un representante de la iglesia Catoacutelica tuvo como se sabe que sufrir sus criacuteticas y el rechazo a la exposicioacuten de sus ideas escritos y traducciones biacuteblicas Fray Luis en su obra La perfecta casada deja clara su idea sobre la mujer y la funcioacuten que eacutesta debiacutea ocupar en la sociedad que le tocoacute vivir Para Fray Luis la mujer no era una imagen idealizada del laquoamor corteacutesraquo como la de los escritores neoplatoacutenicos sino un ser de carne y hueso con derechos y responsabilidades en la sociedad de igual manera que el hombre (McKendric 10)

Seriacutea exagerado afirmar que Fray Luis de Leoacuten pone a la mujer por encima del hom-bre en el contexto social Sin embargo y siempre teniendo en cuenta las limitaciones a

142 JUAN FRANCISCO MAURA

las que su profesioacuten y su tiempo le obligaban procura dejar claro que la mujer (casada) merece todo el respeto y ayuda que sea posible de su marido

Porque aunque es verdad que la naturaleza y estado pone obligacioacuten en la casada como decimos de mirar por su casa y de alegrar y des-cuidar continuamente a su marido de la cual ninguna mala condicioacuten de eacutel la desobliga pero no por eso han de pensar que ellos tienen licencia para serles leones y para hacerlas esclavas antes como en todo lo de-maacutes es la cabeza el hombre asiacute todo este trato amoroso y honroso ha de ser principio del marido Porque ha de entender que es compantildeera suya o por mejor decir parte de su cuerpo (Fray Luis de Leoacuten 21 cap 3)

En el reciente estudio de Mar Martiacutenez Goacutengora Discursos sobre la mujer en el Huma-nismo renacentista espantildeol se presenta esa posicioacuten ambigua del fraile agustino en refe-rencia a la funcioacuten de la mujer en la sociedad renacentista

Fray Luis se opone a la funcioacuten otorgada en la eacutepoca a la mujer de mera imagen pasiva Sin embargo fray Luis totalmente encardinado en la cultura del Renacimiento es consciente de la imposibilidad de ignorar ciertos presupuestos De ahiacute la frecuencia en la que el autor anima a las mujeres a buscar una laquofamaraquo puacuteblica que soacutelo una voz masculina puede proveerles Si la mujer desempentildea perfectamente su funcioacuten de casada el marido recibiraacute honra haciendo posible para ella ser alabada por los miembros de la comunidad (187)

Ya se ha mencionado a Isabel la Catoacutelica como impulsora de toda la empresa ultra-marina pero es precisamente gracias a su influencia cuando se pone de moda entre di-versas damas de su tiempo mdashsiglos XV y XVImdash la praacutectica de ciertos estudios y ciencias Beatriz Galindo conocida popularmente como laquoLa latinaraquo fue la que ensentildeoacute latiacuten a la reina Isabel Dice Juliaacuten Juderiacuteas en su obra La Leyenda Negra laquoA los hombres se unen las mujeres en este afaacuten de saber y vemos a Dontildea Beatriz Galindo maestra de latiacuten de la Reina a dontildea Luciacutea de Medrano que explicoacute los claacutesicos en Salamanca a dontildea Fran-cisca de Lebrija que desempentildeoacute una caacutetedra de retoacuterica en la Universidad de Alcalaacuteraquo (Juderiacuteas 74)

Nos cuenta Eustaquio Fernaacutendez de Navarrete que a la muerte del ceacutelebre Antonio de Nebrija quien a impulsos de la reina catoacutelica publicase la primera gramaacutetica europea en lengua romance su hija Antonia le supliacutea en las clases de filosofiacutea y retoacuterica en la Uni-versidad de Alcalaacute cuando eacuteste se encontraba ya viejo y enfermo (xcvi)

No existe ninguna razoacuten para pensar que las las mujeres de clases maacutes favorecidas que pasaron al Nuevo Mundo no disfrutaran de los mismos beneficios y libertades que sus homoacutelogas peninsulares Seraacute preciacutesamente uno de los hijos del mismo Antonio de Nebrija el doctor Sancho de Lebrija quien se encargue de dar poder a Antoacuten Pareja sastre para que la obra escrita de su padre tanto en latiacuten como en romance se distri-buya y venda laquoasiacute en Indias como en otras partesraquo (AHPS Libro del antildeo 1536 Oficio IV Fragmento de un libro Escribaniacutea Cristoacutebal Becerra Folio Primer tercio del legajo Fe-cha 31 de diciembre) En cuanto a las clases menos favorecidas la monarquiacutea espantildeola se preocupoacute desde un primer momento de alfabetizar a todos sus suacutebditos hembras y varones incluyendo los naturales de los territorios conquistados

143ESPANtildeOLAS DE ULTRAMAR EN LA HISTORIA Y EN LA LITERATURA

La educacioacuten de los indiacutegenas americanos fue una sincera preocupa-cioacuten de los reyes de Espantildea casi desde el descubrimiento del Nuevo Mundo Entre las primeras instrucciones de los Reyes Catoacutelicos a sus gobernadores de las Islas Antillas figuran las dadas a Nicolaacutes de Ovan-do en 1503 ordenaacutendole levantar en cada pueblo una escuela junto a la iglesia laquoen la que todos los nintildeos que hubiere en cada una de dichas poblaciones se junten dos veces al diacutea para que alliacute el capellaacuten les ensentildee a leer y a escribirraquo (Vega 9-10)

En la obra renacentista de Cristoacutebal de Villaloacuten El Crotaloacuten se ofrecen unas imaacutegenes muy graacuteficas de las mujeres de la eacutepoca y del laquoexceso de libertadraquo que seguacuten el autor en boca de uno de sus personajes disfrutaban Desde el punto de vista antropoloacutegico y social las siguientes liacuteneas ofrecen una buena imagen de la apariencia fiacutesica de las mujeres de su tiempo y de su actitud vista desde la perspectiva parcial del personaje de la obra

Pues aun no pienses Demophon que la vanidad y perdicioacuten destas livianas mujeres se le ha de pasar a Dios sin castigo que yo te oso afirmar por cosa muy cierta y que no faltaraacute Que por ver Dios su disolucioacuten desenvoltura desverguumlenza y poco recogimiento que en ellas en este tiempo hay visto que asiacute viacutergenes como casadas viudas y solteras todas por un comuacuten viven muy suelta y muy disolutas en su mirar andar y meneo muy curiosas y que por la calle van con un cu-rioso paso en su andar descubierta su cabeza y cabello con grandes y deshonestas crenchas muy alto y estirado el cuello guintildeando con los ojos a todos cuantos topan haciendo con sus cuerpos lascivos meneos (Villaloacuten 860-61 vol 2 canto 20)

El pasaje antes citado pese a parecer humoriacutestico en nuestros diacuteas no lo era tanto en la eacutepoca en que fue escrito ya que la visioacuten de la mujer como parte integrante del pa-trimonio del padre o del marido podiacutea de alguna manera poner en juego laquola honraraquo de su posesor Pese a esto se aprecia como la mujer teniacutea cierto margen de libertad que no se limitaba a las caacutemaras de un convento o a una vida totalmente alejada del mundanal ruido En la siguiente cita continuacioacuten de la anterior se puede observar la serie de ac-cesorios y aderezos que las mujeres de la eacutepoca utilizaban en sus vestidos y cuerpos llamando la atencioacuten la complejidad y sofisticacioacuten de los atuendos descritos

Por esta su comuacuten deshonestidad se cierto que vendraacute tiempo en el cual ha de hacer Dios un gran castigo en ellas pelarse han todos sus cabellos hacieacutendolas a todas calvas y seraacute tiempo en que les quitaraacute Dios todos sus joyeles sortijas manillas zarcillos collares ajorcas y apretadores de cabeza Quitarles ha los partidores de crenchas tenaci-cas salsericas redomillas y platericos de colores y todo geacutenero de afei-tes sahumerios guantes adobados sebos y unturas de manos y otros olores Alfileres agujas prendedores Quitarles ha las camisas muy del-gadas y los manteos vasquintildeas briales saboyanas nazarenas y rebo-cinos y en lugar de aquellos sus cabellos encrespados y enrifados les daraacute pelambre y calvez y en lugar de aquellos apretadores y joyeles

144 JUAN FRANCISCO MAURA

que les cuelgan de la frente les daraacute dolor de cabeza y por cinta de ca-deras de oro muy esmaltadas y labradas les daraacute sogas de muy aacutespero esparto con que se cintildean y aprieten y por aquellos sus muy curiosos y suntuosos ataviacuteos de su cuerpo les daraacute siacutelici y desta manera haraacute Dios que lloren su lascivia y desorden y que de su lujuria y deshonestidad hagan grave penitencia Entonces no habraacute quien las quiera por su he-diondez y miseria en tanto que siete mujeres se encomendaran a un varoacuten y eacutel de todas huiraacute menospreciaacutendolas y aborrecieacutendolas como de gran mal (Villaloacuten 860-61 vol 2 canto 20)

Excelente lista de aderezos femeninos de los cuales pocos son reconocibles en nues-tros diacuteas Gran frustracioacuten debiacutea de tener con las mujeres el autor de estas liacuteneas sien-do al parecer muy poco correspondido por estas uacuteltimas La misoginia que aparece en estas liacuteneas refleja cierta ingenuidad La mujer que se nos presenta debioacute de ser bastante atractiva y sofisticada portando una gran variedad de adornos muchos de ellos de origen oriental y de perfumes que poco tendriacutean que envidiar a los de la mujer moderna En Descripcioacuten breve de toda la tierra del Peruacute Tucumaacuten Riacuteo de la Plata y Chile obra escrita en Chile entre 1603 y 1609 por el padre Reginaldo de Lizarraga nacido en Medelliacuten (Espantildea) en 1545 y trasladado a Ameacuterica a los quince antildeos vemos una asombrosa semejanza con la cita anterior En esta obra del padre dominico dedicada al entonces presidente del Consejo de Indias conde de Lemos observamos coacutemo su descripcioacuten de la vestimenta de las mujeres de Lima ofrece notables semejanzas con la escrita unos antildeos antes en Espantildea En su capiacutetulo 51 titulado laquoDe los vestidos de las mujeresraquo dice lo siguiente

Lo que en esta ciudad [Lima] se admira mucho y aun lo que se ha-biacutea de refrenar es los vestidos y trajes de las mujeres son en esto tan costosas que casi no se sabe como lo pueden sufrir sus maridos La soberbia de ellas es demasiada y no sabemos en lo que han de venir a parar plegue a Dios y no sea en lo que pararon aquellas de quien dice Nuestro Sentildeor Porque las hijas de Sioacuten se ensoberbecieron (esto es las ciudadanas) cuando saliacutean de sus casas llevaban las gargantas ex-tendidas los ojos altos a una y otra parte guintildeaacutendolos los pasos muy compuestos el Sentildeor las volveraacute calvas y les raeraacute los cabellos de sus cabezas les quitaraacute sus chapines y jerbillas bordadas las medias lunas rodetes las cadenas y collares de oro las ajorcas los tocados costosos los punzones de oro para partir las crenchas los zarcillos y los olores los anillos y piedras preciosas etc y por los olores seles daraacute muy pes-tilencial olor y por las cintas de oro sogas de esparto etc No creo yo hay en lo descubierto del mundo ciudad en su tanto ni cuatro veces mayor que a tanta soberbia en este particular como esta nuestra ciu-dad [Lima] llegue acueacuterdome que los antildeos pasados maacutes ha de treinta y ocho que llegando un religioso nuestro de Espantildea nacido y criado en Toledo a nuestro convento de esta ciudad cerca de la fiesta de Cor-pus Christi tratando de ella y de la suntuosidad majestad y riqueza que aquel diacutea en Toledo en calles y ventanas se mostraba le deciacuteamos que no nos espantase porque en nuestra ciudad veriacutea coacutemo no le ha-

145ESPANtildeOLAS DE ULTRAMAR EN LA HISTORIA Y EN LA LITERATURA

ciacutea mucha ventaja Toledo Llegoacute la fiesta vio la riqueza que se mostroacute en los vestidos de las mujeres adornos de ventanas altares y calles dijo que la riqueza de Toledo en este diacutea mostrada no haciacutea muchas ventajas a la de esta ciudad Pues es cierto que hay tanta diferencia de entonces ahora en lo que vamos tratando como de vestidos de aldea a vestidos de corte con justo tiacutetulo se podriacutea moderar por los virreyes esta soberbia pero no seacute por queacute no se modera y siacute seacute por queacute ni los maridos no tienen aacutenimo para moderarlo ni los gobernadores tampo-co (Lizarraga 38 lib 1 cap 51)

Seriacutea injusto y exagerado afirmar que los descubrimientos transoceaacutenicos se hicieron por la presioacuten que ejercieron las mujeres sobre sus amantes para que estos les trajesen laquomaacutes raacutepidamenteraquo todo ese laquosin finraquo de delicadezas exoacuteticas de todo tipo que existiacutean en el Oriente Lo que siacute es cierto es que las mujeres fueron grandes consumidoras de perfumes afeites sedas joyas y otros bienes suntuarios siendo muy conscientes de lo que hoy entendemos como laquomodaraquo Martiacuten Fernaacutendez de Navarrete en su indispensa-ble trabajo sobre los primeros viajes transoceaacutenicos Coleccioacuten de los viajes y descubrimien-tos menciona de paso la situacioacuten de algunas mujeres durante el siglo XV Es precisa-mente esta eacutepoca en la cual portugueses y castellanos entran en conflicto por el control de algunas posesiones en las costas africanas

y crecioacute el lujo a tal extremo que aun las mujeres de los menestrales y artesanos se confundiacutean en los vestidos con las de alto linaje y esta-do usando ropas de ricas telas de seda de oro de lana con forros de martas y pieles y con guarniciones de oro plata y aljoacutefar cuyo gasto por ser ruina de las familias se tratoacute de corregir aunque sin efecto en las Cortes de Palenzuela (M Fernaacutendez de Navarrete 75 21)

El mismo autor resalta la importancia que tuvo para el comercio de Castilla el contar con una buena armada que protegiese a los barcos de piratas y otros peligros Gracias a los inventarios que se han conservado del duque de Beacutejar y de don Alvaro de Zuacutentildeiga conocemos el lujo de estos sentildeores en perlas orientales piedras preciosas telas y demaacutes utensilios de gran valor134 Existe una Real Pragmaacutetica de Fernando el Catoacutelico a Diego Coloacuten en donde aparece nuevamente la conciencia que se teniacutea sobre la manera de ves-tir que deberiacutean llevar las damas castellanas

R PRAGMAacuteTICA SOBRE EL VESTIR Y GASTAR SEDA EN LAS IN-DIAS Valladolid 12 de noviembre de 1509 Don Fernando etc A vos Don Diego Coloacuten nuestro Almirante y Gobernador de las Indias del mar Oceacuteano y a otro cualquier mi Gobernador etc Sepades que yo he sido informado de los muchos gastos y costas que se han hecho y facen y se esperan hacer si yo no lo mando proveer y remediar en el vestir y gastar de las sedas y brocados y bordados en la Isla Espantildeola y en las otras islas y poblaciones de las dichas islas del mar Oceacuteano tra-yendo en ello mucho desorden y yo por el amor y voluntad que tengo

134 AGI Indiferente 418 Libro 2 fol 87v Publicada en DH Am Tom 6 paacutegina 191 DIA Tomo 31 pag 470 DIU Tomo 5 paacuteg 166 Seguacuten la RC a Diego Coloacuten fechada a 14 de noviembre de 1509 es la pragmaacute-tica que se guarda en Castilla sobre la manera de vestir (DIU Tomo 5 paacutegina 174)

146 JUAN FRANCISCO MAURA

a esas dichas Indias y a los pobladores dellas y porque deseo que ellas se aumenten y acrecienten por las haber ganado y descubierto por la gracia de Nuestro Sentildeor con nuestra industria trabajo y costa y los po-bladores dellas no hagan sobre lo suso dicho tan excesivos gastos sino pues que van a ellas con deseo y voluntad de se ayudar y aprovechar del oro que por gracia de Nuestro Sentildeor se descubre de cada diacutea se detengan en lo gastar en semejantes cosas para se aprovechar dellos en otras cosas que maacutes les convenga asiacute para sus personas como para sus haciendas y por evitar y excusar lo suso dicho mandeacute lo platicar con algunos de mi Consejo y por ellos visto se halloacute que porque nuestros suacutebditos y naturales que viven y estaacuten en dichas Indias no gasten sus haciendas en semejantes desoacuterdenes y que las conserven y guarden pa-ra sus menesteres y por el bien y el pro comuacuten de todos generalmente mando dar esta mi carta premaacutetica sancioacuten la cual quiero y mando que haya fuerza y vigor de ley bien ansiacute y a tan cumplidamente como si fuese fecha y promulgada en Cortes por lo cual ordeno y mando que en cuanto a mi merced y voluntad fuere ninguna ni algunas personas de cualquier ley estado condicioacuten que sean que estuvieren de morada o vivienda o en otra cualquier manera en la dicha Isla Espantildeola y en las otras islas desas dichas Indias y tierra firme no puedan traer y traigan ropa alguna de brocado ni de seda ni de chamelote de seda ni zarzahaacuten ni tercenel ni tafetaacuten ni vainas ni correas de espada ni en cinchas ni en sillas ni en alcorques ni en cosa alguna ni tampoco puedan traer ni trai-gan bordados de seda ni chapado de plata ni de oro de martillo ni fila-do ni tejido ni de otra cualquier manera pero que las personas que tu-vieren en las dichas Indias bienes asiacute muebles como raiacuteces que valgan hasta la cuantiacutea de mil castellanos que ellos y los hijos que tuvieren de hasta edad de catorce antildeos traigan jubones y caperuzas y bolsas y ribe-tes y pestantildeas de seda de cualquier color que quisieren con tanto que en una ropa no traigan maacutes de un ribete y que no haya en los dichos ribetes y pestantildeas maacutes anchura de cuanto un dedo pulgar y que no se traiga en los ruedos de las ropas y que puedan traer becas de tercenel y de tafetaacuten y de papahigos de camino aforrados en el mismo tercenel y tafetaacuten y ansiacute mismo permitimos que puedan traer de seda las cora-zas y guarnecer las faldas y gocetes y capacetes y baberas y quejotes y traer cojines de seda en la silla de la jineta y que las mujeres de las tales personas que tuviesen bienes en la dicha cuantiacutea de los dichos mil castellanos y sus hijas siendo doncellas puedan traer gonetes y corseacutes y fajas de dos varas de largo de seda y [borradas dos letras por mancha de tinta] mas y de lo de vestir y mudar cuando quisieren y por bien tuvieren quier sea moyil o faldilla o cota o haacutebito u otra cualquier ropa con tanto que juntamente no puedan vestir ni vistan maacutes de una ni les pongan trepas ni tiras de seda ni de brocado ni de oro tirado ni tejido ni relido ni en las ropas de pantildeo pongan cortapisas ni lisonjas ni trepas ni tiras ni otra guarnicioacuten alguna de seda ni de brocado salvo que puedan traer un ribete o pestantildea de seda de anchura de un dedo pulgar asiacute en

147ESPANtildeOLAS DE ULTRAMAR EN LA HISTORIA Y EN LA LITERATURA

las ropas de seda como en las de pantildeo en los ruedos de las faldas y para las costuras y no otra cosa alguna y que no traigan la dicha seda en las guarniciones de las mulas ni en angarillas ni en sillas ni en pantildeos ni en otra cosa alguna y que ansiacute mismo no puedan traer mantillas de seda ni enforradas en seda sopena que l que contrario hiciere pierda las ro-pas que ansiacute trujere vestidas por primera vez y sea repartido la mitad para el juez que lo juzgare y la otra mitad para el juez que lo acusare y por la segunda que pierda la ropa y se parta como dicho es y sean desterrados de la isla donde viviere para dos antildeos y por cuanto algu-nas personas de los que nuevamente destos reinos de Castillaa van a se avecindar y poblar y estar en las dichas Indias y son de honra acae-ce que no llevan tantos bienes que valgan la dicha cuantiacutea de los mil castellanos que mando que tengan los que hubieren de traer seda en la manera que dicha es que a eacutestos tales no se entienda y extienda lo suso dicho y que puedan traer la dicha seda seguacuten y en la manera que dicha es y no maacutes hasta tanto que haya un antildeo que estaacuten en las dichas Indias que corra y se cuente desde el diacutea que llegare fasta ser cumplido y que siacute cumplido no tuviere bienes que valgan la dicha cuantiacutea de los dichos mil castellanos que no puedan traer seda ninguna so la dicha pena de suso contenida la cual mando a vos las dichas nuestras justi-cias y a cada una de vos que esta mi carta y todo lo en ella contenido y cada cosa y parte dello guardeacuteis y cumplaacuteis y ejecuteacuteis por manera que se cumpla y ejecute lo en ella contenido so pena de perdimiento de los oficios y que seades inhaacutebiles para haber otros semejantes y que pagueis la estimacioacuten de la tal ropa que dejardes de ejecutar y para que lo susodicho sea notorio y ninguno dello pueda pretender ignorancia mando que esta mi carta sea pregonada puacuteblicamente por las plazas y mercados y otros lugares acostumbrados desas dichas islas por prego-nero y ante escribano puacuteblico(Konetzke Coleccioacuten 23)135

Tambieacuten se sabe de las joyas que Rodrigo Ponce de Leoacuten marqueacutes de Caacutediz debioacute dar a dontildea Beatriz Pacheco (M Fernaacutendez de Navarrete 75 22) Lo que siacute queda claro es que la navegacioacuten seraacute a partir de estos antildeos la forma maacutes raacutepida e importante para comerciar con aquellos paiacuteses de Oriente que antes soacutelo era posible alcanzar a traveacutes de rutas terrestres Existe un documento muy representativo de este periodo sobre la posesioacuten de joyas de gran valor por parte de miembros de una de las familias maacutes repre-sentativas residentes en Ameacuterica Los protagonistas son en este caso el almirante Diego Coloacuten y su mujer Mariacutea de Toledo Dice el documento que El jurado Antoacuten Bernal y Juana de Hoces su mujer vecinos de Sevilla en la collacioacuten de Santa Cruz reciben de Diego Coloacuten Almirante de las Indias laquoun joyel muy rico de oro de hechura de escudo que tiene en medio una piedra preciosa grande esmeralda e debaxo de la dicha piedra un rostro de aacutengel labrado en el mismo oro esmaltado e a cada lado del dicho rostro una piedra preciosa diamante pura y debaxo una piedra gruesa pendiente que pesa el dicho

135 AGI Indiferente 418 Libro 2 fol 87v Publicada en DH Am Tom 6 paacutegina 191 DIA Tomo 31 pag 470 DIU Tomo 5 paacuteg 166 Seguacuten la RC a Diego Coloacuten fechada a 14 de noviembre de 1509 es la pragmaacutetica que se guarda en Castilla sobre la manera de vestir (DIU Tomo 5 paacutegina 174)

148 JUAN FRANCISCO MAURA

joyel con todo lo susodicho medio marcoraquo Los citados Antoacuten Bernal y su esposa se dan por pagados de todo lo que se les adeudaba y se obligan a su vez a devolver el joyel al Almirante si este les paga en dinero El 23 de agosto de 1530 siete antildeos despueacutes la virreina canceloacute la anterior obligacioacuten y recuperoacute el mencionado joyel (AHPS Libro del antildeo 1523 Oficio I Escribaniacutea Alonso de la Barrera Folio 1173 Fecha 3 de diciembre) En la misma casa del almirante otra mujer Briolanga Muntildeiz su tiacutea materna se obliga a pagar al mercader genoveacutes Batista Catantildeo 22 ducados de oro laquopor cierto raso que le comproacute y habiacutea de ser pagado en el puerto de Santo Domingoraquo (AHPS Libro del antildeo 1509 Oficio V Libro uacutenico Escribaniacutea Francisco Esquibel Folio Primer tercio del lega-jo Fecha 9 de marzo) Dontildea Briolanga recibiacutea cada antildeo para su mantenimiento 100000 maravediacutes del almirante mayor de las Indias por medio de Gaspar Gurricio monje del monasterio de Santa Mariacutea de las Cuevas (AHPS Libro 1510 Oficio XV Libro II Es-cribaniacutea Bernal Gonzaacutelez Vallesillo Folio primer tercio del legajo Fecha 4 de julio) Resulta interesante hacer notar la temprana presencia (1516) de un ingleacutes en Santo Domingo involucrado igualmente en la compra de telas Se trata de laquoNicolas Arnoteraquo residente en Santo Domingo que debe pagar a Mariacutea Caldera mujer del comendador Diego Barbosa el valor de una cama de sargas de colores de Flandes (AHPS Libro del antildeo 1516 Oficio XV Libro II Escribaniacutea Bernal Gonzaacutelez Vallesillo Folio Primer tercio del legajo Fecha 28 de agosto) Sin embargo anteriormente a esa fecha (1514) encontramos a un veneciano casado con una inglesa mucho maacutes ceacutelebre en sus viajes trasoceaacutenicos laquoSevastiaacuten Cavotoraquo capitaacuten del rey don Fernando y vecino de Sevilla136

De forma paralela se observa tambieacuten un cierto desenvolvimiento de la mujer en su medio lo que equivaliacutea a intercambios de informacioacuten a todos los niveles incluyendo por lo tanto el cultural No era extrantildeo que tuviesen libros de comedias a mano y que llegasen incluso a escribir comedias ellas mismas Efectivamente la sospecha de que las damas llegasen a escribir comedias estaba bien fundada Veacuteanse algunos ejemplos Ana Caro Malleacuten de Soto una de las maacutes famosas dramaturgas de la Sevilla del siglo XVII autora de El conde de Partinupleacutes utiliza el tema del amor en sus maacutes diversas variantes fiacutesicas y espirituales como el eje de casi todas sus obras (Perry 57) Este hecho por otra parte indica el favor del puacuteblico ante un tema tan popular Veacutease otro ejemplo

The drama of this period did not present love and marriage as a simple partnership however and many dramatists contrasted laquoprofaneraquo with laquohonestraquo love Feliciana Enriacutequez de Guzmaacuten who wrote Tragicome-dia Los jardines y campos sabeos in Seville in the early seventeenth cen-tury presented the hero Clarisel as the victim of laquopervertedraquo and fickle Belidiana in part 1 so blinded by her beauty that he feels himself laquoin shackles and in chainsraquo (Perry 57)

Pero las damas espantildeolas de esta eacutepoca no soacutelo escribiacutean comedias algunas tambieacuten se aventuraron a escribir tratados cientiacuteficos Uno de estos casos fue el de Oliva Sabu-co de Nantes Barrera que a finales del siglo xvi escribioacute un tratado meacutedico sobre la naturaleza humana advirtiendo que la lujuria podiacutea perjudicar al cuerpo Se basaba en

136 Sebastiaacuten Caboto o laquoSevastiaacuten Cavotoraquo estaba casado con Juana Cavoto vecina que fue de la ciudad de Londres en la parroquia de San Gil (AHPS Libro del antildeo 1514 Oficio I Libro II Escribaniacutea Mateo de la Cuadra Folio 253 Fecha 14 de Septiembre) citado en CFAAPS Vol 3 doc 128 p 37

149ESPANtildeOLAS DE ULTRAMAR EN LA HISTORIA Y EN LA LITERATURA

la presuncioacuten de que la lujuria provocaba que el cerebro emitiese un liacutequido que iba al estoacutemago enfriaacutendolo y debilitaacutendolo interrumpiendo de esta manera las funciones vitales (Perry 58)

Se sabe que en la eacutepoca de Isabel la Catoacutelica habiacutea muchas mujeres estudiantes y que la propia reina las impulsaba a estos menesteres iniciativa que obtuvo sus frutos en las deacutecadas siguientes Ademaacutes de las conocidas novelistas Mariacutea de Zayas y Sotomayor y dontildea Mariana de Carvajal existioacute toda una serie de escritoras de todos los geacuteneros lite-rarios que florecieron a ambos lados del Atlaacutentico y que no solamente llaman la aten-cioacuten por su nuacutemero sino por la calidad de sus obras Algunas de ellas como dontildea Luisa de Padilla condesa de Aranda calificada por Serrano y Sanz como laquola maacutes notable de cuantas florecieron en Espantildea en el siglo XVIIraquo personificaraacuten a la perfeccioacuten a este tipo de mujeres Tambieacuten deberiacuteamos saber cuaacutentas seriacutean las mujeres que escribieron con pseudoacutenimos masculinos

La informacioacuten sobre las diferentes facetas de la vida femenil con que contamos no es abundante A pesar de todo podemos hacernos una idea maacutes clara de la verdadera situacioacuten de la mujer a traveacutes de una nueva interpretacioacuten de los textos tanto de los medievales como de las croacutenicas de los primeros antildeos del descubrimiento y conquista Algunos estudios relativamente recientes surgidos por el intereacutes general que suscita todo lo concerniente a la mujer han ayudado a considerar nuevas perspectivas La eru-dicioacuten moderna estaacute poniendo en tela de jucio los estereotipos tradicionales en cuanto a la pasividad y relevancia femeninas asiacute como al tradicional misogenismo que se atri-buye a la eacutepoca medieval Cada vez estaacute maacutes claro que la existencia de estas mujeres variaba considerablemente seguacuten la eacutepoca posicioacuten social o situacioacuten geograacutefica por lo que hacer valoraciones categoacutericas sobre laquola situacioacuten de la mujerraquo puede llevar a graves equivocaciones (Dillard 9) Es fundamental para comprender a la mujer espa-ntildeola que pasoacute al Nuevo Mundo tener en cuenta las enormes diferencias de todo tipo que existieron en la sociedad castellana y novomundista Un pintoresco ejemplo es el de laquolas tapadasraquo una usanza de origen aacuterabe que se pondriacutea de moda en Castilla poco despueacutes de la toma de Granada por los Reyes Catoacutelicos y que despueacutes pasariacutea al Peruacute Esta tradicioacuten ha perdurado en algunos pueblos de Espantildea hasta relativamente poco tiempo pueblos como Mojaacutecar (Almeriacutea) y Vejer de la Frontera (Caacutediz) son ejemplo de esta costumbre tambieacuten conocida como el de las laquocobijaacutesraquo

Tras la caiacuteda del reino musulmaacuten de Granada en 1492 la corona espa-ntildeola prohibioacute a las mujeres aacuterabes de Andaluciacutea vestir los velos islaacutemi-cos que cubriacutean sus rostros y ocultaban su identidad No era faacutecil des-arraigar esta costumbre tan ancestral y secular y el emperador Carlos asiacute como su hijo el rey Felipe II tuvieron que repetir la prohibicioacuten Cuando finalmente las moras fueron obligadas a abandonar sus velos y a adoptar el chal castellano comenzaron a utilizar la nueva prenda para cubrir sus rostros dejando al descubierto soacutelo uno de los ojos Esta nueva moda en el uso del chal tradicional nos asegura leoacuten Pi-nelo era extremadamente graciosa sensual y atractiva a causa de la belleza exoacutetica de los ojos de las moras Las mujeres cristianas de Granada Coacuterdoba y Sevilla imitaron pronto la nueva moda de llevar el chal y asiacute nacioacute la laquotapadaraquo hispana Desde Sevilla la nueva moda

150 JUAN FRANCISCO MAURA

fue a las colonias de ultramar y tomoacute raices especialmente en el Peruacute (Martiacuten 317-18)

En un reciente estudio sobre la educacioacuten de la mujer en la Ameacuterica virreinal apare-cen algunos ejemplos significativos de mujeres espantildeolas que consagraron gran parte de sus vidas a la tarea docente Dentro del proceso educativo de las espantildeolas que fueron a las Indias destaca el papel de dontildea Catalina de Bustamante Joseacute de Jesuacutes Vega y Ma-riacutea Luisa Caacuterdenas de Vega dicen en su obra Ameacuterica Virreinal La Educacioacuten de la mujer que esta mujer pocos antildeos despueacutes del descubrimiento del Nuevo Mundo se dedicoacute a trabajar en favor de los indios aunque por desgracia su nombre y sus hechos en la labor docente hayan sido ignorados por los historiadores modernos (Vega 12-13)

Son varias las veces que se nombra a Catalina de Bustamante en el citado estudio y varias las fuentes antiguas en que se recoge la presencia de tan distinguida laquomatrona muy honrada y de buen ejemploraquo de la que ya hablaba Zumaacuterraga y sobre la que se hizo un informe enviado a Carlos V describiendo sus actividades en la Nueva Espantildea firmado por cuatro de los misioneros maacutes conocidos de Meacutexico

El informe dice que los franciscanos de Texcoco acababan de cons-truir un nuevo monasterio y cedido el antiguo A una honrada y honesta y muy virtuosa matrona que se dice Catalina de Bustamante para que ende instruyese a las hijas de los sentildeores de la comarcala cual con el favor de Dios y limosnas que don Hernando [Corteacutes] les haciacutea para su sustentacioacuten [teniacutea en esa casa-hogar] hasta trescientas mujeres antes maacutes que menos (Vega 14)

Estas laquocasas-hogarraquo no estaban regentadas necesariamente por monjas sino por lo que llamaban laquobeatasraquo mujeres que sin estar estar sujetas a la autoridad eclesiaacutestica se dedicaban a un laquolucro honestoraquo Llamadas tambieacuten laquobeateriosraquo eran diferentes a los conventos de monjas y constituiacutean las primeras escuelas de la mujer en la Nueva Espa-ntildea (Vega 20-21) Fue gracias al ejemplo de mujeres como Catalina de Bustamante que dedicaron sus vidas a la educacioacuten de los indiacutegenas que existiesen otras continuando su ejemplo Motoliniacutea dice claramente que laquode ese primer encerramiento (el de Texcoco regentado por Catalina) salieron otras honestas y muy virtuosas duentildeas que ensentildeaban a las maacutes menudasraquo (Vega 23)

Pero dontildea Catalina de Bustamante pese a ser una singular mujer y la iniciadora de la educacioacuten de la mujer en Meacutexico no fue un caso aislado corresponde maacutes bien a un patroacuten al que se ajustaron muchas de las pioneras de la Nueva Espantildea que sembraron instituciones de educacioacuten de la mujer En 1530 unos antildeos maacutes tarde aparecioacute una de las grandes protectoras de la instruccioacuten femenina en Ameacuterica La emperatriz Isabel de Portugal (Vega 24)

Desde comienzos de la conquista fueron varios los centros docentes regentados por mujeres en los que la ensentildeanza no estaba impartida por monjas Una de las institucio-nes maacutes sobresalientes del sistema educativo fue el Colegio de Nintildeas que se establecioacute en la ciudad de Meacutexico a principios del siglo XVI con maestras que no eran monjas Estas seglares conocidas comunmente como laquomigasraquo eran las descendientes de las antiguas beatas Su ubicacioacuten permanente fue determinada en 1548 lugar que serviriacutea de escue-la ininterrumpidamente hasta 1862 cuando el edificio fue convertido en bodega (Vega 60) No se debe perder de vista que no soacutelo por el hecho de llevar una vida secular se

151ESPANtildeOLAS DE ULTRAMAR EN LA HISTORIA Y EN LA LITERATURA

gozaba de maacutes privilegios Era maacutes bien al contrario En las carreteras las mujeres segla-res no inspiraban el mismo respeto que las monjas que ademaacutes teniacutean contacto cons-tante con personas de los dos sexos no pertenecientes a la Iglesia (Arenal 297) Ademaacutes dentro de las murallas del convento desapareciacutean muchas de las barreras sociales que limitaban a la mujer de esta eacutepoca

La presencia femenina y la monarquiacutea

Pues iquestcoacutemo sabes tuacute preguntoacute don Quijote que los grandes llevan detraacutes de siacute a sus caballerizos Yo seacute lo direacute respondioacute Sancho Los antildeos pasados es-tuve un mes en la corte y alliacute vi que paseaacutendose un se-ntildeor muy pequentildeo que deciacutean que era muy grande un hombre le seguiacutea a caballo a todas las vueltas que daba que no pareciacutea que era su rabo Pregunteacute que coacutemo aquel hombre no se juntaba con el otro sino que siempre anda-ba tras deacutel Respondieacuterome que era su caballerizo y que era uso de grandes llevar tras siacute a los tales Desde enton-ces lo seacute tan bien que nunca se me ha olvidado (Cervan-tes Don Quijote)

Los monarcas espantildeoles fueron conscientes de que sin la presencia femenina difiacute-cilmente se podriacutea solidificar una conquista a todos los niveles La mayor parte de los virreyes y altos cargos trajeron a sus mujeres con ellos y en las ciudades principales de Hispano-Ameacuterica como la ciudad de Meacutexico Guatemala Lima o Potosiacute habiacutea mujeres que disfrutaban de una esmerada educacioacuten (gramaacutetica latiacuten poesiacutea historia muacutesica) Esto dariacutea origen a una elegante y hasta cierto punto sofisticada sociedad en la que las mujeres tomaron parte en asuntos maacutes importantes que los que sus homoacutelogas toma-ran en las colonias portuguesas laquoThere were brilliant vice-regal courts at Mexico City and Lima far exceeding anything that could be found in Portuguese or English America during the seventeenth centuryraquo (Boxer 39) Las estadiacutesticas con las que contamos hoy no soacutelo demuestran que las mujeres llegaron al Nuevo Mundo en respetables porcen-tajes sino que ademaacutes tuvieron una participacioacuten activa llegando a intervenir en algu-nos casos en las liacuteneas de vanguardia Resulta difiacutecil aproximarse al estado de aacutenimo de aquellas mujeres que vivieron en eacutepocas tan lejanas Para ello es necesario indagar en los documentos de la eacutepoca para lograr rescatar del pasado todos esos tesoros de la historia muchas veces tergiversados y manipulados con el fin de que sirvan a propoacutesi-tos actuales Es en los viejos manuscritos donde queda testimoniada su presencia tan rica en dolores tragedias y por queacute no en amores Fue la llegada de estas mujeres una brisa de esperanza y de ilusioacuten para aquellos que ya estaban en las tierras de ultramar y

152 JUAN FRANCISCO MAURA

veiacutean venir de su propia tierra aquello que maacutes antildeoraban amantes madres hermanas Un haacutelito de vida y poesiacutea que suavizaba las costumbres de estos rudos y romaacutenticos pioneros laquoporque para ser hombres de tales empresas algo de romaacutentico debioacute de existir en ellos y que es tan propio del espantildeol y abandonariacutean en brazos tan gentiles sus bruscos modales que habiacutean adquirido en aacutespero contacto en selvas y montantildeasraquo (Villafantildee 125)

Hoy sabemos que en la normativa oficial de la Espantildea del siglo XVI y XVII se favoreciacutea el paso de mujeres al Nuevo Mundo Afirmar lo contrario no solamente es falso sino que implica un desconocimiento total de los primeros dos siglos de la colonizacioacuten espantildeola La presencia de estas mujeres espantildeolas fue efectiva laquolas disposiciones al respecto demuestran claramente que se teniacutea especial intereacutes en su arraigo y que se tra-taba de defender su posicioacuten de mujeres casadas con conquistadores y colonizadoresraquo (Villafantildee 126) Los monarcas comprendiacutean que era praacutecticamente imposible que los hombres viviesen sin mujeres y que de ser asiacute era de esperar que se cometiesen abusos con las indias lo que incidiriacutea en la moral social y en el buen gobierno de la colonia Ademaacutes sin un asentamiento definitivo con hogares y familias difiacutecilmente se podriacutea llevar a cabo una presencia permanente en las nuevas colonias (Orsquo Sullivan-Beare 45)

Empezando por los Reyes Catoacutelicos la preocupacioacuten de que en las colonias se esta-bleciesen nuacutecleos que tuviesen como base la familia cristiana fue clara Las capitulacio-nes que a este efecto se hicieron entre los conquistadores y la Corona fueron nume-rosas La efectuada entre Rodrigo de Baacutestidas y Carlos V puede ser un buen ejemplo Fechada en Valladolid el 6 de noviembre de 1524 muestra el propoacutesito de Baacutestidas de establecer una colonia permanente en la desembocadura del riacuteo Magdalena en el terri-torio que hoy vendriacutea a corresponder a Colombia El documento firmado por el Empe-rador comienza asiacute

El Rey Por cuanto por parte de vos Rodrigo de Baacutestidas vecino de la ciudad de Santo Domingo de la Isla Espantildeola Me fueacute fecha relacioacuten que por servicio de la Catholica Reyna Mi Sentildeora e Nuestro os ofre-ceacuteis de poblar e poblariades la provincia e puerto de Santa Marta que en Castilla de Oro llamada la Tierra Firme e que la poblariades dentro de dos antildeos siguientes haciendo en ella un pueblo en que no menos haya en eacutel al presente cincuenta vezinos que los quince de ellos sean casados y tengan consigo a sus mujeres y que lo teniades fecho dentro de dos antildeos y de hoy en adelante lo maacutes que fuese posible asiacute de cris-tianos espantildeoles como de indios (Restrepo 1 30)

De igual manera el priacutencipe Felipe (futuro Felipe II) en las capitulaciones establecidas en 1547 con Juan de Sanabria para que eacuteste fuese como gobernador y capitaacuten general de la dicha provincia escribe lo siguiente laquoPrimeramente que seais obligado e os obligeis a llevar destos Reynos de Castilla a la dicha provincia del Rio de la Plata cien casados con sus mujeres e hijos para poblar la dicha provincia y con ellos llevareis a vuestra muger e hijos (CDI de Ameacuterica y Oceaniacutea 23 119)

En numerosas ocasiones se pone de manifiesto el apoyo de la monarquiacutea a la emigra-cioacuten femenina tantas que difiacutecilmente se podriacutean enumerar todos los casos Lo cierto es que la legislatura vigente favoreciacutea la emigracioacuten y traslado de mujeres con toda una se-

153ESPANtildeOLAS DE ULTRAMAR EN LA HISTORIA Y EN LA LITERATURA

rie de alicientes137 sobre todo si eacutestas estaban casadas pasaje para llevar a las familias franquicia de derecho para los artiacuteculos que portasen consigo favoritismo en cargos destinos y contrataciones a aquellos que pasasen con sus mujeres incluyendo ademaacutes de los castellanos y leoneses a suacutebditos de otras partes de la corona incluso genoveses y portugueses si estos veniacutean acompantildeados de sus consortes (Fernaacutendez Duro 15-16)

Incluso se llegoacute a imponer penas a aquellos hombres casados que no llevasen a sus mujeres con ellos a Indias en el teacutermino de un antildeo El mismo emperador en una ceacutedula otorgada al virrey de la Nueva Espantildea le recomendaba que laquoprocurase persuadir a ca-sarse a los solteros que estuviesen en edad y situacioacuten de hacerloraquo prometieacutendoles que al efectuar el matrimonio seriacutean preferidos en el reparto de indios En la isla de San Juan de Puerto Rico los cargos oficiales y oficios puacuteblicos debiacutean de ser desempentildeados por los casados en primer lugar En Meacutexico ocurrioacute lo mismo con los cargos de corregido-res (Konetzke laquoemigracioacutenraquo 140-41) Felipe II al igual que sus antecesores y sucesores reiteraraacute y justificaraacute los beneficios de los que seraacuten acreedores aquellos que tengan allaacute a sus mujeres laquoque los que han servido en los descubrimientos de las dichas Indias y tambieacuten los que ayudan a la poblacioacuten dellas que tienen allaacute sus mugeres sean preferi-dos en los aprouechamientos qualesquierraquo mandando que despueacutes de los conquistado-res se tuviera en cuenta para la laquoprovisioacuten de los corregimientosraquo a los colonos casados siempre que estuvieran capacitados para dichos cargos (Konetzke laquoemigracioacutenraquo 141)

Las disposiciones en favor del matrimonio son claras ya sea por medio de un favo-ritismo manifiesto como en los casos antes citados o mediante medidas de cohercioacuten para que esta poliacutetica se llevase a cabo Don Sebastiaacuten Ramiacuterez de Fuenleal obispo de Santo Domingo y presidente de la Audiencia de Meacutexico propuso que a aquellos enco-menderos que no estuviesen casados y que no hubiesen tomado parte en la conquista se les quitase los indios concedidos con la obligacioacuten de devolveacuterselos si en el plazo de un antildeo habiacutean contraiacutedo matrimonio (Konetzke laquoemigracioacutenraquo 142-43) Por supuesto hubo excepciones a estas reglas En algunos casos ni la mujer teniacutea especial intereacutes en vivir junto con su marido en las Ameacutericas ni el marido queriacutea ir a buscar a su mujer pasado el plazo de un antildeo En el presente documento y de forma excepcional las auto-ridades reales protegen a los conyuges para que puedan seguir viviendo separados en continentes diferentes

Nuestras justicias de la ysla de Cubagua e otras qualesquier de las nuestras Yndias yslas e tierra firme del mar oceacuteano e a cada uno e qualquier de vos a quieacuten esta mi ceacutedula fuese mostrada por parte de Alonso de Tapia nuestro veedor de la provincia de Paria me ha sido hecha relacioacuten que ha mucho tiempo que reside en esas partes donde nos ha servido en lo que se ha ofrecido e que agora vos otros le apre-miaacuteis a que venga o embiacutee a estos Reinos por su muger lo cual no puede al presente hazer a causa de no ter posibilidad para ello a mi me ha suplicado vos mandase que no le compeliacuteesedes ny apremiaacutesedes a que viniese o enviase por la dicha su muger y dieacutesedes por libres los fiadores que tenyades para que dentro de un antildeo embiariacutea o verniacutea por

137 Reales Ceacutedulas de los antildeos 1502 y 1503 Academia de la Historia Coleccioacuten Muntildeoz tomo 75 fols 209 y 220 citado por Fernaacutendez Duro 15

154 JUAN FRANCISCO MAURA

ella o como la mi merced fuese lo cual visto por los de nuestro consejo juntamente con una peticioacuten presentada por dontildea Mariacutea Gudiel muger del dicho Alonso de Tapia por la cual nos suplica lo mismo que acor-dado que debiacutea mandar esta mi ceacutedula para vos por la qual vos mando que no compelaacuteis ni apremieacuteis al dicho Alonso de Tapia a que venga ni enviacutee a estos reinos por la dicha su muger si no fuere a que la pro-vea de lo que fuere necesario para su mantenimiento y deys por libres quales quier fianzas que sobre ello haya dado e no fagades ende al por alguna manera Firmado en la villa de Valladolid a VII diacuteas del mes de febrero de mil e quinientos e treinta y siete antildeos yo el licenciado Con-de de Samano y sentildealada del cardenal Beltraacuten y Carbajal [Aparte en letra pequentildea] Este diacutea se despachoacute una provisioacuten por la cuaacutel su Mag hizo merced a Alonso de Tapia de la veedoriacutea de la provincia de Paria por muerte de Garciacutea de Aguilar con las clausulas ordinarias y con el mismo salario que teniacutea Aguilar Firmado del emperador y de Beltraacuten y Bernal y Velaacutezquez El Rey (Registro de disposiciones Riacuteo Marantildeoacuten AGI Indiferente General Legajo 416 libro 2 Fols 94v y 95r)

El punto maacutes interesante a destacar de todas estas disposiciones oficiales en cuanto a la emigracioacuten femenina al Nuevo Mundo no es otro que la libertad que se da a la mujer de decidir si quiere o no casada o sin casar trasladarse al nuevo continente no como una imposicioacuten sino como un precepto laquoel espiacuteritu de las disposiciones en el sentido de asegurar la vida marital de los casados significa que la mujer que su marido invita a pa-sar a las Indias puede negarseraquo (Villafantildee 127) Habriacutea que ver las opciones laquorealesraquo ade-maacutes de las legales y econoacutemicas que le quedaban a la mujer si tomaba esta decisioacuten

El saber la libertad de eleccioacuten que estas mujeres teniacutean de antemano antes de aden-trarse en las interminables penalidades y aventuras que los viajes de la navegacioacuten tran-soceaacutenica suponiacutean hace que sus hechos y esfuerzos cobren auacuten maacutes relieve En nume-rosas ocasiones estas mujeres cruzaron el oceacuteano una y maacutes veces sin otro motivo que el de defender los derechos e intereses de los suyos Lo que resulta maacutes valioso de todo esto es que lo hicieran por propia iniciativa arriesgando sus vidas para que se hiciese justicia y para que no les faltase lo necesario a aquellos que estaban en la otra orilla Las autoridades vigentes conocedoras de los vaciacuteos legales existentes en las nuevas colo-nias se apresuraron a poner en vigor aquellas normas que redundaran en el beneficio de los menos favorecidos por las circunstancias La institucioacuten del matrimonio cuya trans-cendencia es fundamental en la vida juriacutedica y social de la mujer tuvo que ser legislada en Ameacuterica con una serie de nuevas disposiciones agregados modificaciones y aclara-ciones Asiacute pues la legislacioacuten de base espantildeola tuvo que sufrir en tierras americanas esta serie de cambios por motivos poliacuteticos y sociales (Villafantildee 126)

Para hacer un sumario de lo dispuesto hasta el siglo XVI en cuanto a la legislacioacuten de las mujeres que teniacutean familia o intereses en Indias merece la pena mencionar que existieron una serie de disposiciones que protegiacutean a las mujeres para que eacutestas no se viesen abandonadas por sus maridos En un epiacutegrafe de la Recopilacioacuten de 1680 (libro VII tiacutetulo 3) se deja ver claramente la preocupacioacuten de las autoridades en este asunto laquoDe los casados en Espantildea e Indias que estaacuten ausentes de sus mujeres y esposasraquo (Vi-llafantildee 126-27)

155ESPANtildeOLAS DE ULTRAMAR EN LA HISTORIA Y EN LA LITERATURA

La lista de disposiciones se hace interminable En los reinados de Fernando el Catoacute-lico Carlos V Felipe II Felipe III o incluso Carlos II la insistencia es constante La ra-zoacuten de esta insistencia seriacutea bastante obvia dado que con un oceacuteano por medio seriacutean muchos los que se aprovechasen de llevar una doble vida marital sin el estricto control y vigilancia de sus mujeres que se encontraban en la peniacutensula La ley XXVII libro IX tiacutetulo XXVI determina laquoDeclaramos por personas prohibidas para embarcarse y pasar a las Indias todos los casados y desposados en estos reinos lsquosino llevaren con ellos sus mujeresrsquo aunque sean virreyes oidores gobernadores o nos fuesen a servir en cual-quier cargo y oficios de Guerra Justicia y Hacienda porque es nuestra voluntad que todos los susodichos lleven a sus mujeresraquo (Villafantildee 127) laquoLos eclesiaacutesticos eran los en-cargados de dar cuenta a los tribunales competentes de aquellos que estando casados permaneciacutean en Indias sin sus mujeres Son reiteradas las disposiciones de Fernando el Catoacutelico en este sentidoraquo138 En 1514 el rey don Fernando ordena en una provisioacuten para la isla Espantildeola laquodoy licencia eacute facultad aacute cualquier persona naturales de estos Reynos para libremente se puedan casar con mujeres naturales de esa dicha ysla sin tener que incurrir por ello en pena algunaraquo (Villafantildee 129)

No se debe olvidar tampoco a aquellas mujeres que decidieron pasar a las laquonuevas tierrasraquo solteras Estas mujeres tambieacuten tuvieron un papel importante en el desarrollo de las nuevas colonias Los organismos espantildeoles del momento como los mandatarios indianos y todos los cronistas no dejaron pasar desapercibida la importancia social de estas mujeres en la poliacutetica de poblamiento laquo[E]s cierto que los pueblos de Indias nuevamente poblados no se tienen por fijos o estables ni permanentes hasta tanto que mujeres espantildeolas entren en ellos y los encomenderos y conquistadores se casen por muchas causas y respetos buenos y saludables que para ello hayraquo (Villafantildee 126-27)

Si la intencioacuten era la de una presencia permanente en las tierras americanas la mujer soltera que pasase a ellas siempre seriacutea un motivo maacutes para el colono o conquistador de continuar en el mismo suelo Se podriacutea empezar una familia si asiacute se quisiese sin tener que pensar en volver a la metroacutepoli ya fuese a disfrutar de los bienes adquiridos o a laquobuscarraquo una esposa El problema aparecioacute cuando se produjo un exceso de mujeres solteras lo que de alguna manera alteroacute la estructura social existente ya que no habiacutea muchas opciones para ellas aparte del matrimonio o el convento

En consideracioacuten a que la experiencia habiacutea demostrado que un exce-sivo nuacutemero de mujeres ejerciacutea perniciosa influencia sobre la moral y las costumbres se suplicaba al rey no otorgase a aquellas tantas auto-rizaciones para emigrar al Peruacute La ciudad de la Plata fundada en 1538 emite en 1577 un informe en el que se expone la urgente necesidad de que se funde un convento de monjas pues en el territorio de las Au-diencias de Los Charcas existiacutea un gran nuacutemero de muchachas que no pudieacutendose casar se hallaban en gran peligro de perderse (Konetzke laquoemigracioacutenraquo 149)

138 Solorzano Pereira Juan de Libro Primero de la Recopilacioacuten de las Ceacutedulas Reales Cartas y Provisiones y Or-denanzas Reales Noticia preliminar de Ricardo Levenne Universidad de Buenos Aires Facultad de Derecho Y Ciencias Sociales Pub del Instituto de Historia del Derecho Argentino Coleccioacuten de Textos y Documentos para la Historia del Derecho Argentino t V Buenos Aires Imp de la Universidad de Buenos Aires 1945 (Li-bro I Ley 10 laquoQue los Espantildeoles puedan casar con Indias y al contrario a su voluntadraquo t2 p 138 citado en Villafantildee 129

156 JUAN FRANCISCO MAURA

Entristece ver coacutemo se manejan las cifras de estas mujeres como si de ganado o de bienes suntuarios se tratase Por otra parte existieron irregularidades como la de pobla-doras espantildeolas que vivieron amancebadas con hombres que ya estaban casados en la peniacutensula Normalmente esto ocurriacutea cuando la estancia del conquistador se prolonga-ba maacutes de lo debido en lugares donde habiacutea pocas espantildeolas Muchas veces nacieron hijos de estas uniones que hicieron auacuten maacutes difiacutecil la situacioacuten para las mujeres que esperaban en Espantildea a un marido que ya no teniacutea ningunas intenciones de volver En los juicios de residencia los documentos acostumbran a citar estos casos ya que era parte de su obligacioacuten castigar las irregularidades extramatrimoniales y salvaguardar las buenas costumbres familiares que con tanto intereacutes se deseaba mantener laquoUn ejemplo nos lo da la isla de Cuba donde en 1532 viven con hombres casados Olalla Hernaacuten-dez Santillana Aranda lsquola Cordobesarsquo Catalina de Leoacuten Catalina Saacutenchez Francisca Hernaacutendez Mayor de Azebedo Juana de Valeros y lsquouna mujer que estaba en casa de Ayalarsquoraquo (Borges 416)

Estos casos no fueron aislados y mucho menos en Cuba centro neuraacutelgico de todo el movimiento de ida y vuelta entre la metroacutepoli y el Nuevo Mundo Estas ocho acusa-ciones por lo tanto no tienen porqueacute considerarse extraordinarias y menos en el lugar maacutes cosmopolita de las Indias en esos momentos al que llegaban flotas a cada momen-to Al parecer existieron casos parecidos en el Riacuteo de la Plata Peruacute y Nueva Espantildea (Ratcliffe 347) El margen legal para que estas mujeres viviesen como quisiesen estuvo limitado por una moral que veiacutea uacutenicamente en el matrimonio o el convento una salida laquovaacutelidaraquo para que fueran aceptadas socialmente Los hombres en iguales circunstan-cias fueron juzgados por una laquomoralraquo mucho maacutes permisiva

La mujer y el cuerpo eclesiaacutestico

Pues iquestquieacuten diablos os traiacutedo aquiacute dijo don Quijote siendo hombre de la iglesia iquestQuieacuten sentildeor replicoacute el caiacutedo laquomi desventuraraquo Pues otra mayor os amenaza dijo don Quijote sino me satisfaceacuteis a todo cuanto primero os pregunteacute (Cervantes Don Quijote )

Otro factor a tener en cuenta en un anaacutelisis sobre la presencia de la mujer en el Nuevo Mundo es el que tiene que ver con la institucioacuten maacutes importante de las que llegaron desde Europa la iglesia catoacutelica Sin aacutenimo de criticar a tan compleja institucioacuten res-ponsable de gran parte de los aconteceres en el Nuevo Mundo vale la pena analizar algunas singularidades Muchos de sus miembros fueron grandes ejemplos de valor e inteligencia a la hora de tratar los maacutes variados y escabrosos asuntos con los que se encontraron los cristianos en la otra orilla durante este periacuteodo Se debe resaltar tam-

157ESPANtildeOLAS DE ULTRAMAR EN LA HISTORIA Y EN LA LITERATURA

bieacuten su caraacutecter medieval en la manera de hacer apostolado y de entender y tratar a los potenciales cristianos Si se tienen en cuenta los privilegios y prerrogativas que algunas de las altas jerarquiacuteas eclesiaacutesticas tuvieron no seriacutea superfluo estimar que un respeta-ble porcentaje de la poblacioacuten de origen laquodudosoraquo muy bien podiacutea venir de la misma iglesia Fueron muchas las viacutectimas y muchas las familias divididas por un padre laquoinvi-sibleraquo Gran parte de los hijos o laquosobrinosraquo de estos sacerdotes pasaron a ocupar cargos similares incluyendo los privilegios que estos cargos llevaban consigo como si se trata-se de cualquier otro oficio gremial transmitido generacionalmente regla tan comuacuten en la Europa medieval Todaviacutea a finales del siglo XIII en Espantildea los derechos de los hijos y nietos de los sacerdotes estaban protegidos por la ley sin que hubiesen podido ser erradicados por las reformas gregorianas (Ratcliffe 347)139

Las letras espantildeolas ya se haciacutean eco de estos lances amorosos entre representantes de la Iglesia y ciertas damas del lugar desde los tiempos del poeta riojano Gonzalo de Berceo En su obra maacutes conocida Los milagros de Nuestra Sentildeora Berceo describe con un realismo ingenuo y sencillo relatos de humor y de humanismo sobre aquellos hombres de carne y hueso que eran perdonados por la intercesioacuten de la Virgen Mariacutea Juan Ruiz por su lado haraacute de su Libro de buen amor la obra maacutes representativa en este sentido Seriacutea prolijo recordar la actuacioacuten de la Iglesia durante diversos periacuteodos de la Edad Media no soacutelo en Espantildea sino en toda Europa En la Espantildea musulmana del siglo XII concretamente en Sevilla el comportamiento de los representantes de la iglesia cristia-na (mozaacuterabe) en territorio islaacutemico es duramente criticado por el sevillano Ibn Abdun Este precioso documento muestra el estricto control y falta de confianza que existiacutea sobre la mujer prohibieacutendolas que entrasen en las laquoabominablesraquo iglesias cristianas

porque los cleacuterigos [cristianos] son libertinos fornicadores y sodomi-tas Asimismo debe prohibirse a las mujeres francas que entren en la iglesia maacutes que en diacuteas de funcioacuten o fiesta porque alliacute comen beben y fornican con los cleacuterigos y no hay uno de ellos que no tenga dos o maacutes de estas mujeres con que acostarse Han tomado esta costumbre por haber declarado iliacutecito lo liacutecito y viceversa Convendriacutea pues mandar a los cleacuterigos que se casasen como ocurre en Oriente y que si quie-ren lo hagan (Leacutevi-Provenccedilal 150)

Pese a existir una convivencia paciacutefica durante gran parte de la Edad Media entre los tres credos monoteiacutestas de Espantildea (cristianos musulmanes y judiacuteos) esto no suponiacutea que no existiese desprecio y desconfianza entre estos grupos religiosos Dice Abdun resaltando el peligro que suponiacutea que una mujer entrase en casa de un cleacuterigo cristiano de vida ceacutelibe

No debe tolerarse que haya mujer sea vieja o no en casa de un cleacuterigo mientras eacuteste rehuacutese casarse Obliacutegueseles ademaacutes a circuncidarse co-mo les obligoacute al-Mutadid pues si a lo que dicen siguen el ejemplo de Jesuacutes (iexclDios les bendiga y salve) Jesuacutes se circuncidoacute y precisamente ellos que han abandonado esta praacutectica tienen una fiesta que celebran solemnemente el diacutea de su circuncisioacuten (Leacutevi-Provenccedilal 150-151)

139 Valdriacutea la pena ver si han cambiado mucho las cosas desde hace quinientos antildeos a esta parte o si in-cluso la iglesia moderna ha retrocedido en tolerancia en cuanto a las relaciones sexuales de los representantes de la Iglesia

158 JUAN FRANCISCO MAURA

El historiador argentino Germaacuten Arciniegas recoge un pasaje ilustrativo de lo men-cionado anteriormente pero trasladado al ambiente de la colonia diciendo que incluso en poblaciones pequentildeas como Santa Fe con poco maacutes de un convento y una ermita la fragilidad de la carne enredaba a frailes soldados y virreyes por igual laquoEl buen So-liacutes que murioacute en olor de santidad con la cabeza reclinada sobre un par de ladrillos y en saya de franciscano cruzaba en las noches el solar de su palacio para ir a besar a la Marichuelaraquo (118-19)

Arciniegas recoge tambieacuten un suceso aparecido en el diario de Lima en 1667 que no tuvo que ser extraordinario durante los primeros antildeos de la colonia laquoEl fraile carmelita mdashGrande hereje y siendo sacerdote deciacutea misa gran perro lujurioso deshonesto que relatando sus maldades dijo que en cierta ciudad habiacutea conocido carnalmente a maacutes de trescientas y sesenta mujeres y en un convento de monjas habiacutea cometido muchos sacrilegios Este lo trujeron preso de Buenos Aires por Chileraquo (119)

Las controversias de la iglesia moderna sobre las relaciones que los eclesiaacutesticos de-ben tener con el sexo femenino parece que no han encontrado todaviacutea respuesta Sigue existiendo miedo y recelo a que la mujer comparta no soacutelo poder en la jerarquiacutea de la iglesiacutea sino en la vida privada de los miembros de la institucioacuten En la Nueva Espantildea el primer obispo de Meacutexico Juan de Zumaacuterraga viendo en la mujer un ser de tentacioacuten irresistible prohibioacute terminantemente la presencia de eacutestas en su casa Ni siquiera para su limpieza y aseo El franciscano Juan de Torquemada se refiere a este comportamien-to como una de las virtudes del popular obispo

Fue este benditiacutesimo prelado muy amigo de la virtud y de virtuosos y aceacuterrimo reprehendedor de vicios y viciosos y tan enemigo de la ociosidad que no permitiriacutea que alguno de su casa estuviese ocioso fue amiciacutesimo de la limpieza por lo cual jamaacutes consintioacute que mujer alguna entrase en su casa aunque fuese necesaria al servicio de ella ni nunca consintioacute que por alguna ocasioacuten subiese mujer a lo alto y aposentos de ella antes lo teniacutea todo cerrado como un monasterio porque sabiacutea (como quien tambieacuten sabiacutea) que la ocasioacuten suele derribar los maacutes fuertes y robustos corazones (450 lib 20 cap 31)

No fueron uacutenicamente miembros de la iglesia catoacutelica los que valoraron la lucha con-tra la tentacioacuten siguiendo al pie de la letra el crudeliacutesimo refraacuten laquoentre santa y santo pared de cal y cantoraquo Se tienen algunas noticias de la vida social de los primeros tiem-pos de la colonia En estos documentos se puede observar coacutemo no distaban mucho las oacuterdenes que se dictaban en la metroacutepoli y las que se llevaban a cabo en la Nueva Espantildea La vida social tanto de damas como de algunos miembros de la iglesia de las colonias era maacutes laquorelajadaraquo de lo que las normas permitiacutean Gracias a la informacioacuten ofrecida por Manuel Romero de Terreros disponemos de los nombres de las primeras virreinas

Las esposas de los primeros cinco Virreyes Don Antonio de Mendoza Don Luis de Velasco Don Gastoacuten de Peralta Don Martiacuten Enriacutequez de Almanza y Don Lorenzo Suaacuterez de Mendoza Conde de la Coruntildea fueron respectivamente Dontildea Caterina de Vargas Dontildea Ana de Cas-tilla y Mendoza hija de Don Diego de Castilla Sentildeor de Gor y Caba-

159ESPANtildeOLAS DE ULTRAMAR EN LA HISTORIA Y EN LA LITERATURA

llerizo de Carlos V Dontildea Leonor de Vieo Dontildea Mariacutea Manrique hija del Marqueacutes de Aguilar y Dontildea Catalina de la Cerda hija del segundo Duque de Medinaceli (Romero 2)

Existen noticias concretas de la seacuteptima virreina de la Nueva Espantildea (1586) dontildea Blanca de Velasco marquesa de Villamanrique En ellas destaca lo anteriormente men-cionado sobre la falta de tolerancia existente en aquellos tiempos difiacutecilmente com-prensible si no fuera por fragmentos esporaacutedicos conservados sobre la vida colonial en la Nueva Espantildea En la siguiente Relacioacuten hecha por autores anoacutenimos sobre la visita que hizo Fray Alonso Ponce Comisario General de la Orden Seraacutefica a las provincias de la Nueva Espantildea se mencionan las eneacutergicas medidas que con los miembros de su orden en su opinioacuten de moral laquomuy relajadaraquo tomoacute este religioso Tambieacuten aparecen mencionadas sus relaciones con la Virreina

Captoacutese ademaacutes la enemistad del gobernante y de la Virreina Dontildea Blanca de Velasco hija del cuarto Conde de Nieva sentildeora seguacuten pare-ce de conducta ligera y caraacutecter maacutes que dominante laquoPor este mismo tiempo (septiembre de 1586) fueron el Virey y la Vireyna a holgarse y recrearse en la cibdad de Xochimilco Posoacute con toda su casa dentro de nuestro convento en un dormitorio deacutel y detuacutevose alliacute siete u ocho diacuteas en que los indios les hicieron grandes fiestas aunque les costaron caras porque en una dellas murieron dos o tres dellos con un tiro que se disparoacute y reventoacute y al principal indio de aquella cibdad hirieron muy malraquo (Romero 3-4)

A pesar del riacutegido control eclesiaacutestico y civil que habiacutea en la Nueva Espantildea existieron tambieacuten pareacutentesis en los que incluso miembros de la iglesia y mujeres mdashhumanos al fin y al cabomdash pudieron disfrutar de algunos momentos de regocijo y alegriacutea Con-tinuando con la cita anterior el mismo autor se queja del laquoexcesoraquo de libertad en los frailes que se suponiacutea que teniacutean que profesar una extremada pobreza y no digamos castidad En primer lugar se describen pormenorizadamente la abundancia en el tipo y cantidad de comida de toda clase dulces y vino que se consumieron con largueza y generosidad durante aquellas fiestas Pero lo que maacutes indigna al autor (o autores) fue que llegasen a entrar mujeres en el convento

y aunque todo esto es malo delante de Dios y delante de los hom-bres lo que maacutes mal parecioacute y de que todo el mundo tuvo que mur-murar fueacute la demasiada libertad rotura y disolucioacuten que hubo en en-trar y estar muy de propoacutesito mujeres no soacutelo la Vireyna y las suyas sino otras muchas dentro del dicho convento y andar por las celdas como si fuese cosa profana y como si no hubiera breve apostoacutelico que soacute graves penas y censuras prohibe estas entradas y como si a los frai-les no los comprendiera el dicho breve por admitirlas y no estuviera asiacute declarado y mandado por nuestros estatutos generales de Toledo (Romero 4-5)

La preocupacioacuten por las laquotentaciones de la carneraquo fuera del matrimonio siempre es-tuvo en la mente de los religiosos espantildeoles asiacute como de otras nacionalidades y reli-

160 JUAN FRANCISCO MAURA

giones que intentaban vanamente erradicar algo tan intriacutenseco al ser humano como a cualquier otra especie animal Esta preocupacioacuten se acentuoacute mucho maacutes en el Nuevo Mundo donde muchas sociedades tribales no veiacutean a la mujer como parte integrante de su propiedad privada La razoacuten es obviamente socioloacutegica y ha existido desde el principio de los tiempos en las civilizaciones maacutes primitivas laquoNo desearaacutes a la mujer del proacutejimoraquo El quebrantar este precepto equivaldriacutea a desestabilizar desde su base a la sociedad judeo-cristiana fundamentada en la familia Las penas aplicadas en estas transgresiones seraacuten lo suficientemente severas como para marginar socialmente mdashen el mejor de los casosmdash a aquellos que las pongan en praacutectica Siendo la mujer la encar-gada por la naturaleza de trasmitir la descendencia de la especie su libertad sexual se veraacute limitada por el peligro de quedar embarazada cada vez que ignore tal elemental precepto140

Primeras escritoras del Nuevo Mundo

Contra cuerdos y contra locos estaacute obligado cualquier caballero andante a volver por la honra de las mujeres cualesquiera que sean Cuanto maacutes por las reinas de tan alta guisa y pro como fue la reina Madaacutesima a quien yo tengo particular aficioacuten por sus buenas partes porque fuera de haber sido fermosa ademaacutes fue muy prudente y muy sufrida en sus calamidades que las tuvo muchas (Cervantes Don Quijote)

Fueron varias las escritoras que durante los siglos XVI y XVII tuvieron una relacioacuten di-recta o indirecta con el Nuevo Mundo Muchas de ellas eligieron la vida monaacutestica mdashen algunos casos como refugio huyendo de sus maridosmdash uacutenica salida en una estructura social en donde no eran muchas las opciones especialmente en una eacutepoca donde el fac-tor religioso pesaba casi tanto como el econoacutemico pero sobre todo para dedicarse a una vida espiritual difiacutecilmente alcanzable en otras circunstancias Mariloacute Vigil apunta que las monjas que lo eran por su propia voluntad ademaacutes de tener inquietudes religiosas tambieacuten las teniacutean intelectuales como es el caso de la escritora miacutestica espantildeola Santa Teresa de Jesuacutes (1515-1582) que ademaacutes de tener una de las vidas maacutes interesantes que se conozcan supo sacar tiempo para escribir las maacutes bellas manifestaciones de la poesiacutea liacuterica y sobre todo de la prosa castellana (Vigil 237-38) Cada una de estas mujeres de-dicadas a la vida literaria y espiritual de su tiempo se merece muchiacutesimo maacutes espacio del que se les pueda ofrecer en estas pocas liacuteneas No obstante con estas pasajeras men-

140 Aunque afortunadamente las cosas han cambiado para la mujer no se debe dejar de mencionar la can-tidad de abusos sexuales de la que es viacutectima en la sociedad moderna

161ESPANtildeOLAS DE ULTRAMAR EN LA HISTORIA Y EN LA LITERATURA

ciones se espera al menos incluirlas y poder despertar el suficiente intereacutes para que sus vidas y sus obras no sigan sumergidas en las simas del olvido Para que estas mujeres de la iglesia pudiesen satisfacer su curiosidad cognoscitiva era necesario romper todas aquellas barreras que supusiesen un estorbo o una restriccioacuten a la hora de investigar consultar o hablar con cualquier persona religiosa de cualquier orden o secular ya fue-se obispo o cleacuterigo Las posiciones intelectuales entre las diferentes oacuterdenes religiosas fueron muy dispares como bien es sabido No eran iguales los planteamientos teoloacute-gicos de los dominicos que los de los franciscanos o los de los carmelitas que los de los agustinos o jesuitas Era necesario por lo tanto tener acceso a estas fuentes de informa-cioacuten para poder constrastar las diferencias y hacer valoraciones propias (Vigil 237-38) El escritor espantildeol Caro Baroja destaca el caraacutecter enciclopeacutedico del catolicismo donde se han integrado corrientes y posturas muy dispares que a traveacutes del diaacutelogo daban cierto espacio al creyente con maacutes curiosidad intelectual para que este pudiese compa-rar y valorar las diferentes opciones que se le ofreciacutean (Vigil 237-38)

Varias de estas mujeres intelectuales fueron hijas de conquistadores que aunque na-cidas en suelo americano seguiacutean expresaacutendose en la lengua de sus padres con no me-nos fuerza que sus contemporaacuteneas peninsulares Es cierto que existieron numerosas escritoras en el Nuevo Mundo durante el siglo XVIII algunas dedicadas incluso al estudio de las matemaacuteticas como la mexicana Dontildea Francisca Gonzaga y Castillo Pero para limitar el presente trabajo a los siglos XVI y XVII uacutenicamente se incluiraacuten ejemplos de estos dos siglos

La peruana Josefa de Alarcoacuten publicoacute en 1648 unas liras dedicadas a las Exequias del Priacutencipe Baltasar Carlos

Cifro en capilla breveEl tribunal de la Magestad maacutes graveEn fe de lo que debeA Carlos que en dos mundos no cabe141

El caso de Sor Jeroacutenima de la Asuncioacuten es muy interesante una mujer que tuvo la oportunidad de viajar a Meacutexico y posteriormente a las Filipinas para cumplir con las mi-siones que le habiacutean sido encomendadas por su orden Nacida en Toledo en 1555 en el seno de una noble y acaudalada familia estuvo destinada a recorrer el mundo ofrecien-do sus servicios a todos los necesitados distinguieacutendose por su ardiente caridad laquovien-do que los galeotes eran tratados con dureza excesiva sobre todo cuando los llevaban de un pueblo a otro procuroacute aliviar las penas de aquellos desgraciados y lo consiguioacute en parteraquo (Serrano y Sanz 268 65) Hija del licenciado e ilustre jurista Pedro Garciacutea Yaacute-ntildeez y de dontildea Catalina de la Fuente ingresoacute contra su voluntad en el monasterio de las Clarisas de Santa Isabel de los Reyes (Toledo) el 5 de agosto de 1570 (Trevintildeo 46) hay que decir que eacutesta no seraacute la uacutenica voluntad contra la que tuvo que luchar

Sor Jeroacutenima se embarcoacute para Meacutexico y de alliacute partioacute hacia Manila junto con siete compantildeeras en el famoso laquoGaleoacuten de Manilaraquo que saliacutea anualmente del puerto mexi-cano de Acapulco Su viaje a las Filipinas duroacute un antildeo y tres meses desde su salida de Espantildea tiempo en el que demostroacute un gran valor y determinacioacuten por el soacutelo hecho de

141 Manuel Serrano y Sanz Apuntes para una biblioteca de escritoras espantildeolas desde el antildeo 1401 al 1833 vols 268 269 270 271 Biblioteca de Autores Espantildeoles (Madrid Atlas 1975) 268 19

162 JUAN FRANCISCO MAURA

embarcarse en tan precarias naves Fue la primera misionera de Oceaniacutea muriendo en Manila en 1621 Alliacute fundoacute el monasterio de Santa Clara que perviviriacutea hasta ser bom-bardeado en la Segunda Guerra Mundial (Trevintildeo 47) Escribioacute su Vida donde trata de la fundacioacuten del convento y de todas las tribulaciones mdashllegoacute a ser excomulgadamdash y satisfacciones que una vida dedicada a una causa justa proporciona Tambieacuten escribioacute una obra de caraacutecter filosoacutefico-teoloacutegico titulada Carta de marear en el mar del mundo nombre alegoacuterico que da cuenta de la enorme distancia recorrida a traveacutes del laquomar del espiacuterituraquo por sor Jeroacutenima He aquiacute algunos de sus versos de caraacutecter religioso

Vuestra soy para vos naciacuteiquestQueacute mandaacuteis hacer de miacute Inaccesible grandezaEterna Sabiduriacuteay bondad del alma miacuteaDios un ser poder y Altezamirad la suma pobrezade eacutesta que se ofrece aquiacuteiquestQueacute mandaacuteis hacer de miacute (Serrano y Sanz 268 66)

Ya en Meacutexico tenemos otro ejemplo de una mujer dedicada por completo a Dios y al estudio y composicioacuten de obras de caraacutecter teoloacutegico Dontildea Ana Mariacutea del Costa-do de Cristo nacida en la ciudad de Tlaxcala hacia el antildeo 1650 Tomoacute la orden de San Francisco para consagrarse a las labores de su orden y a la escritura Se dice que con los escritos de Dontildea Ana Mariacutea se podriacutean formar veinte tomos (Serrano y Sanz 268 282) Estas son algunas de sus obras Vida y muerte de Jesucristo Nuestro Sentildeor Vida del Seraacutefico Padre San Francisco de Asiacutes Vida de la iacutenclita Virgen Santa Clara Vida del sutiliacutesimo doctor Juan Duns Escoto

Pero no todas las monjas tuvieron vidas tan dedicadas al estudio y la oracioacuten Loacutegica-mente entre un nuacutemero tan grande de mujeres existioacute de todo y seriacutea un error pensar que todos los conventos femeninos estaban integrados por laquocaacutendidas palomasraquo Una monja en el siglo XVI y XVII teniacutea mucha maacutes fuerza que una mujer ordinaria ya que actuaban en grupo y la entrada a los recintos donde viviacutean estaba permitida solo a mu-jeres Esta situacioacuten las haciacutea mucho maacutes fuertes a todos los niveles que una mujer sola protegida uacutenicamente por su familia laquoLas monjas durante los siglos XVI y XVII lucharon por eludir la clausura y por zafarse del control que los frailes de las secciones masculi-nas de sus congregaciones ejerciacutean sobre ellasraquo (Vigil 230) Soacutelo un antildeo maacutes tarde que dontildea Ana Mariacutea del Costado de Cristo en 1651 y a 12 leguas de Meacutexico nacioacute la sin par Sor Juana Ineacutes de la Cruz hija de don Pedro Manuel de Asbaje natural de Vergara (Vizcaya) y de Dontildea Isabel Ramiacuterez de Santillana hija de espantildeoles (Serrano y Sanz 268 289) Por ser sin lugar a dudas la poeta maacutes importante de su tiempo y probable-mente la maacutes conocida del mundo hispano no profundizaremos en ella Su obra es un canto a la inteligencia y el exponente maacutes destacado de la literatura barroca americana tanto en prosa como en verso Destacareacute simplemente que Sor Juana Ineacutes pese a vivir en un sociedad donde no eran excesivas las libertades concedidas a las mujeres tuvo el caraacutecter y la determinacioacuten de dejarnos las maacutes bellas poesiacuteas amorosas que si bien estuvieron enmarcadas en un ambiente religioso como era de esperar por su condicioacuten

163ESPANtildeOLAS DE ULTRAMAR EN LA HISTORIA Y EN LA LITERATURA

pudieron transcender como unas de las maacutes bellas manifestaciones literarias que hoy en diacutea se conservan Fue su agudeza mental sensibilidad y cultura tal que no fueron suficientes los soacutelidos muros del convento para contener el genio de tan extraordinaria mujer Recordemos sus conocidiacutesimos versos en defensa de las mujeres

Hombres necios que acusaacuteisa la mujer sin razoacutensin ver que sois la ocasioacutende lo mismo que culpaacuteis142

Las metaacuteforas y la delicadeza que emplea en rebatir a su obispo en su laquoRespuesta a sor Filotea de la Cruzraquo no son solamente el epiacutetome del feminismo de su tiempo sino una de las maacutes brillantes manifestaciones del barroco hispano Poesiacutea teatro ensayo y un conocimiento extraordinario de las ciencias claacutesicas de su tiempo hacen de esta mujer un ejemplo extraordinario de las letras universales Ya son cientos los artiacuteculos y libros que se han escrito sobre Sor Juana y no dejan de aparecer tesis doctorales sobre los maacutes diversos temas conectados con la citada autora143 Como nos dice Stephanie Merrim en su documentada obra Early Modern Womenrsquos Writing and Sor Juana Ineacutes de la Cruz

She wrote and published on secular themes as atypical for a nun as human love Her remarkably extensive writings essayed and reenacted most of the (male) poetic dramatic theological and even philosophi-cal discourses of her times in the metropolis making her works a com-pendium of baroque culture in its diversity and syncretism Sor Juana self-creation as a learned women effectively toppled many of the walls in which she was materially enclosed and positioned her within the dynamic world of early modern European culture (xii)

No se debe dejar de mencionar a otras escritoras novohispanas de la eacutepoca que aun-que no fueron tan proliacuteficas y relevantes como Juana Ineacutes de la Cruz dejaron testimo-nio de algunos acontecimientos que tienen intereacutes socioloacutegico o testimonial Este es el caso de Dontildea Mariacutea Estrada Medinilla de igual nombre y apellido que la mujer que acompantildeoacute a las tropas de Corteacutes en su primera entrada a Meacutexico Natural de Meacutexico publicoacute toda su obra a mediados del siglo XVII concentraacutendose principalmente en la lle-gada del Marqueacutes de Villena virrey y capitaacuten general de la Nueva Espantildea a la ciudad de Meacutexico en el antildeo 1640 Escrita en octavas reales la obra trata de las fiestas de toros y cantildeas con que se obsequioacute al citado virrey Fue impresa en Meacutexico en 1641 (Serrano y Sanz 269 402)

Mucho maacutes importante para el presente libro es Dontildea Isabel de Guevara que escribioacute en 1556 la carta en que se expone la ayuda que ofrecieron las mujeres en el descubri-miento y conquista del Riacuteo de la Plata No cabe la menor duda de que esta carta es uno

142 Para una mejor comprensioacuten del caraacutecter de esta excepcional mujer veacutease entre los numeros trabajos publicados Fredo Arias de la Canal Intento de psicoanaacutelisis de Juana Ineacutes y otros ensayos sorjuanistas (Meacutexico Frente de Afirmacioacuten Hispanista 1972) 47

143 Veacuteanse entre otros trabajos Octavio Paz Sor Juana Ineacutes de la Cruz o las trampas de la fe Georgina Sabat de Rivers En busca de Sor Juana Margo Glantz Sor Juana la comparacioacuten y la hipeacuterbole Gerard C Flynn Sor Juana Ineacutes de la Cruz Stephanie Merrim Feminist perspectives on Sor Juana Ineacutes de la Cruz Pamela Kirk Sor Juana Ineacutes de la Cruz religion art and feminism

164 JUAN FRANCISCO MAURA

de los documentos maacutes importantes con que contamos en relacioacuten a la aportacioacuten fe-menina en el proceso de la conquista de Ameacuterica Su importancia viene dada por varios factores Primero es uno de los primeros testimonios mdashsi no el primeromdash en donde se expone abiertamente la indispensable colaboracioacuten de las mujeres en el descubrimien-to y conquista de tierras en el Nuevo Mundo laquoQue si no fuera por ellas todos fueran acabadosraquo En segundo lugar la informacioacuten vertida en estas liacuteneas presenta en parte la manera de pensar de una mujer espantildeola en tales circunstancias Extraordinario tes-timonio de primera mano que nos da una idea de lo que significoacute en muchos casos el valor y entrega constantes de muchas de estas mujeres que auacuten a riesgo de perder sus vidas no dudaron en luchar al lado de los hombres por una causa que consideraban laquocomuacutenraquo

La relevancia histoacuterica de dicha carta hace que merezca ser transcrita en su totali-dad

Carta de dontildea Isabel de Guevara a la princesa gobernadora dontildea Juana exponiendo los trabajos hechos en el descubrimiento y conquista del Riacuteo de la Plata por las mujeres para ayudar a los hombres y pidiendo repartimiento

para su marido Asuncioacuten 2 de julio de 1556

Muy alta y muy poderosa sentildeora

A esta provincia del Riacuteo de la Plata con el primer gobernador de ella don Pedro de Mendoza hemos venido ciertas mujeres entre las cuales ha querido mi ventura que fuese yo la una y como la armada llegase al puerto de Buenos Aires con mil quinientos hombres y les faltase el bastimento fue tamantildea el hambre que a cabo de tres meses murie-ran los mil esta hambre fue tamantildea que ni la de Jerusalem se le puede igualar ni con otra ninguna se puede comparar Vinieron los hombres en tanta flaqueza que todos los trabajos cargaban de las pobres mu-jeres asiacute en lavarles las ropas como en curarles hacerles de comer lo poco que teniacutean limpiarlos hacer centinela rondar los fuegos armar las ballestas cuando algunas veces los indios les veniacutean a dar guerra hasta cometer a poner fuego en los versos y a levantar los soldados los que estaban para ello dar arma por el campo a voces sargentean-do y poniendo en orden los soldados porque en este tiempo como las mujeres nos sustentamos con poca comida no habiacuteamos caiacutedo en tanta flaqueza como los hombres Bien creeraacute V A que fue tanta la so-licitud que tuvieron que si no fuera por ellas todos fueran acabados y si no fuera por la honra de los hombres muchas maacutes cosas escribiera con verdad y los diera a ellos por testigos Esta relacioacuten bien creo que la escribiraacuten a V A maacutes largamente y por eso cesareacute Pasada esta tan peligrosa turbunada determinaron subir el riacuteo arriba asiacute flacos como estaban y en entrada de invierno en dos bergantines los pocos que quedaron vivos y las fatigadas mujeres los curaban y los miraban y les guisaban la comida trayendo la lentildea a cuestas fuera del naviacuteo y animaacutendolos con palabras varoniles que no se dejasen morir que presto dariacutean en tierra de comida metieacutendolos a cuestas en los

165ESPANtildeOLAS DE ULTRAMAR EN LA HISTORIA Y EN LA LITERATURA

bergantines con tanto amor como si fueran sus propios hijos Y como llegamos a una generacioacuten de indios que se llaman tinbues sentildeores de mucho pescado de nuevo los serviacuteamos en buscarles diversos modos de guisados porque no les diese en rostro el pescado a causa de que lo comiacutean sin pan y estaban muy flacos Despueacutes determinaron subir el Paranaacute arriba en demanda de bastimento en el cual viaje pasaron tanto trabajo las desdichadas mujeres milagrosamente quiso Dios que viviesen por ver que en ellas estaba la vida de ellos porque todos los servicios del naviacuteo los tomaban ellas tan a pechos que se teniacutea por afrentada la que menos haciacutea que otra sirviendo de marear la vela y gobernar el naviacuteo y sondar de proa y tomar el remo al soldado que no podiacutea bogar y escotar144 el naviacuteo y poniendo por delante a los soldados que no se desanimasen que para los hombres eran los trabajos verdad es que a estas cosas ellas no eran apremiadas ni las haciacutean de obliga-cioacuten ni las obligaba si solamente la caridad Asiacute llegaron a esta ciudad de la Asuncioacuten que aunque ahora estaacute muy feacutertil de bastimentos en-tonces estaba de ellos muy necesitada que fue necesario que las muje-res volviesen de nuevo a sus trabajos haciendo rosas con sus propias manos rosando y carpiendo y sembrando y recogiendo el bastimento sin ayuda de nadie hasta tanto que los soldados guarecieron de sus fla-quezas y comenzaron a sentildeorear la tierra y adquirir indios e indias de su servicio hasta ponerse en el estado en que ahora estaacute la tierra He querido escribir y traer a la memoria de V A para hacerle saber la ingratitud que conmigo se ha usado en esta tierra porque al presente se repartioacute por la mayor parte de los que hay en ella asiacute de los anti-guos como de los modernos sin que de miacute y de mis trabajos se tuviese ninguna memoria y me dejaron de fuera sin me dar indio ni ninguacuten geacutenero de servicio Mucho me quisiera hallar libre para me ir a presen-tar delante de VA con los servicios que a SM he hecho y los agravios que ahora se me hacen mas no estaacute en mi mano porque estoy casada con un caballero de Sevilla que se llama Pedro de Esquivel que por servir a SM ha sido causa que mis trabajos quedasen tan olvidados y se me renovasen de nuevo porque tres veces le saqueacute el cuchillo de la garganta como allaacute VA sabraacute A que suplico mande me sea dado mi repartimiento perpetuo y en gratificacioacuten de mis servicios [en el origi-nal del AHN Diversos doc 141 dice ademaacutes mande que sea proveydo mi marido de alguacuten cargo conforme a la calidad de su persona pues el de su parte por sus servicios lo merece] lo merece Nuestro sentildeor acre-ciente su Real vida y estado por muy largos antildeos De esta ciudad de la Asuncioacuten y de julio 2 1556 antildeosServidora de V A que sus Reales manos besa

Dontildea Isabel Guevara

144 Sacar agua de un riacuteo acequia o presa

166 JUAN FRANCISCO MAURA

Sobremdash A la muy alta y muy poderosa sentildeora Princesa dontildea Joana Gobernadora de los reinos de Espantildea etc ndash En su Consejo de Indias (Isabel de Guevara 619-21)

Iroacutenicamente la carta teniacutea que llegar a manos de la desdichada heredera del trono de Castilla e hija de los Reyes Catoacutelicos Juana laquola Locaraquo que habiacutea muerto el antildeo an-terior Son profeacuteticas las palabras de esta mujer no soacutelo porque sus hechos personales quedasen en el olvido sino porque incluso se ha borrado la historia de las mujeres en el Nuevo Mundo negando su presencia Por lo menos Isabel Guevara tuvo acceso a una pluma iquestCuaacutentas seriacutean las que ni siquiera sabriacutean escribir

Otra contemporaacutenea fue dontildea Leonor de Iciz que vivioacute durante la segunda mitad del siglo XVI Interesa sobre todo por los sonetos que escribioacute en elogio de Ercilla soldado que participoacute en la conquista de Chile y que se inmortalizoacute con su obra La Araucana (Serrano y Sanz 269 534) Lo mismo hizo Dontildea Bernarda Lintildeaacuten en 1610 autora de otro soneto en memoria del capitaacuten Gaspar Peacuterez de Villagraacute que participoacute en la conquista de Nuevo Meacutexico (Serrano y Sanz 270 14) Los escritos de estas mujeres tratan de de dos de las eacutepicas maacutes dramaacuteticas de la conquista

En el Peruacute y en pleno siglo XVII aparece otra fundadora de conventos Sor Bernardina de Jesuacutes que ademaacutes fue comparada con Santa Teresa por la semejanza de sus laquocartasraquo con las de la santa de Avila Fue fundadora del convento de Tacunga en Quito maacutes tarde destruiacutedo por un terremoto Dice Serrano y Sanz con respecto a su biografiacutea un tanto legendaria que fue carmelita descalza de Lima y hermana de Dontildea Mariacutea Benavides y Esquivel abuela de D Pedro de Peralta Barnuevo (Serrano y Sanz 269 553) Dicen que esta santa se alimentoacute durante treinta antildeos con laquochochos y caacutescaras de naranja hecho tan raro como increiacuteble Cuando fallecioacute reparaban las monjas en ponerle una vara de azucenas porque habiacutea sido casada y aquellas flores aparecieron milagrosamente sobre el cadaacuteverraquo (Serrano y Sanz 269 553)

Otra limentildea del primer cuarto del siglo XVII con reputacioacuten de santa fue Dontildea Luisa Melgarejo En este caso no se trata de una religiosa de oficio sino de la mujer del doctor Juan de Soto La uacutenica diferencia es que dontildea Luisa al parecer teniacutea laquovisiones y reve-lacionesraquo lo que debioacute poner nervioso a maacutes de un miembro del tribunal del laquoSanto Oficioraquo que consideraron sus escritos laquoculpadosraquo De su papel de laquosantaraquo pasa por lo tanto al de laquoposesaraquo o laquoendemoniadaraquo El inquisidor de Lima Gaitaacuten escribioacute un infor-me donde a traveacutes de la opinioacuten puacuteblica y de otras averiguaciones se deciacutea que dontildea Luisa Melgarejo laquomujer santaraquo sabiacutea cuando las almas de los difuntos saliacutean del Purga-torio El diacutea 14 de noviembre de 1623 se decidioacute tomar posesioacuten de todos los cuadernos en los que habiacutea escrito las experiencias de todos sus laquoarrobos suspensiones extasis y revelacionesraquo Estos cuadernos una vez recogidos presentaron toda una serie de al-teraciones borrones adiciones enmiendas incluso diferente letra por lo que despueacutes de haber sido examinados resultaron culpables145 Excelente imaginacioacuten debioacute tener dontildea Luisa Melgarejo la suficiente al parecer para convencer a algunos miembros de la iglesia de que en sus escritos laquohabiacutea algoraquo que mereciacutea la pena Estas cosas ocurriacutean en Lima uno de los centros culturales maacutes importantes de la vida social y poliacutetica en la Ameacuterica espantildeola Lima a comienzos del siglo XVII seguacuten el empadronamiento llevado

145 Serrano y Sanz 270 47 Veacutease J T Medina Historia del tribunal del Santo Oficio de la Inquisicioacuten de Lima (1569-1820) (Santiago Imprenta Gutemberg 1887) Tomo II 34-41

167ESPANtildeOLAS DE ULTRAMAR EN LA HISTORIA Y EN LA LITERATURA

a cabo en 1614 por el marqueacutes de Montesclaros era una ciudad de 25000 habitantes de los que 11000 eran espantildeoles El nuacutemero de religiosos y religiosas llegaba a 1720 (Pittaluga 77)

Se sabe que en la Isla de Santo Domingo durante el siglo XVI nacioacute o al menos resi-dioacute una poeta de ceacutelebre apellido en los aconteceres del Nuevo Mundo Dontildea Elvira de Mendoza de la que se conserva un manuscrito en la Real Academia de la Historia laquoCantares miacuteos que estaacuteis rebeladosraquo Eugenio de Salazar hace un elogio de ella como poeta en un Soneto a la ilustre Poeta y Sentildeora Dontildea Elvira de Mendoza moradora en la ciudad de Santo Domingo (Serrano y Sanz 270 53)

Nacida en Burgos sobre el antildeo 1590 dontildea Luisa de Padilla merece un lugar aparte dentro del grupo de mujeres escritoras de su eacutepoca Por su estilo faacutecil y castizo su no-vedad de pensamientos y su rica erudicioacuten recibioacute el siguiente comentario de Manuel Serrano y Sanz laquoPocas figuras hay en nuestra historia literaria femenil que puedan compararse a esta eminente prosista acaso la maacutes notable de cuantas florecieron en Es-pantildea durante el siglo XVIIraquo (Serrano y Sanz 270 95-96) Este comentario y comparacioacuten deberiacutea ampliarse para que tambieacuten incluyese a laquola historia literaria varonilraquo

Dontildea Luisa fue defensora de la labor que la Inquisicioacuten estaba realizando en la laquolim-piezaraquo de mujeres laquosoldados del demonioraquo que existieron en algunas provincias espa-ntildeolas en aquel tiempo Muchas de las mujeres que combinaban la magia con los po-deres curativos fueron condenadas no solamente por hombres de la Inquisicioacuten sino tambieacuten por mujeres de todas las clases sociales como es el caso de Luisa de Padilla condesa de Aranda En su obra Elogios de la verdad e invectiva contra la mentira preveniacutea contra aquellos que practicaban artes en contra de la religioacuten cristiana La magiacutea negra seguacuten Padilla era la causante de que muriesen casi tantas personas como otras causas naturales habieacutendose descubierto hasta seis mil brujas en Vizcaya y Guipuzcua con-fesando una mujer de un pueblo pequentildeo haber matado con su laquomagiaraquo a ochocientas personas (Perry 31) Eran estos laquomales de ojoraquo y maldiciones seguacuten la autora las causas de que se secasen los pechos de las madres lactantes que se separasen las parejas casa-das y que abortasen las embarazadas (Perry 31)

Si se tiene en cuenta que dontildea Luisa estuvo emparentada con la maacutes rancia aristocra-cia de su tiempo o lo que es lo mismo con algunos de aquellos que en cierta manera dirigiacutean los destinos de Espantildea en aquella eacutepoca (Duques de Lerma Duque de Uceda Marqueacutes de Cueacutellar Conde de Santa Gadea Marqueacutes de Belmonte por citar algunos) se comprenderaacute mejor su identificacioacuten con una institucioacuten que en teoriacutea velaba por la salvaguarda de los valores laquoeternosraquo de una Espantildea destinada a ser la campeona del ca-tolicismo durante los siglos XVI y XVII El padre de dontildea Luisa fue don Martiacuten de Padilla y Manrique extraordinario militar que proboacute su valor contra enemigos moriscos ingle-ses holandeses piratas berberiscos y el renegado genoveacutes Muley Faxad Fue veterano de la batalla de Lepanto donde apresoacute a cuatro galeras y acompantildeoacute con su escuadra a la reina Dontildea Margarita de Austria cuando vino de Geacutenova en 1598 laquoHabiacutea obtenido a 24 de julio de 1587 el tiacutetulo de Conde de Santa Gadea y en 1596 el de Capitaacuten General de la Armada del mar Oceacuteanoraquo (Serrano y Sanz 27095-96)

Por otra parte tambieacuten se sabe que dontildea Luisa participoacute directamente y desde tem-prana edad en la praacutectica de algunas actividades intelectuales como la historia y la arqueologiacutea a la vez que dedicaba su tiempo a virtudes cristianas como la caridad y el socorro de los necesitados (Serrano y Sanz 270 97) Resulta mucho maacutes faacutecil compren-

168 JUAN FRANCISCO MAURA

der la postura ideoloacutegica de esta gran mujer si tienen en cuenta ademaacutes de los factores antes mencionados otros tantos de caraacutecter biograacutefico concernientes a su educacioacuten y matrimonio

Otra escritora fue la mexicana dontildea Mariacutea Casilda Pozo natural de Temestla (Meacutexi-co) Nacida en el mes de abril de 1682 dejoacute escrita su biografiacutea en 16 cuadernos el ma-nuscrito original se encuentra en la biblioteca del colegio de San Gregorio de Meacutexico Fue su confesor el jesuiacuteta Domingo Quiroga que fue quieacuten la incitoacute a escribir su obra (Serrano y Sanz 270 137) Sor Juana de San Antonio aparece a principios del siglo XVII formando parte de un grupo de religiosas espantildeolas que fueron a Manila por la ruta de Meacutexico Ademaacutes de distinguirse por sus cualidades personales su obra interesa por ofrecer informacioacuten testimonial y costumbrista acerca de la forma de vestir de chinos y japoneses (Serrano y Sanz 270 225)

Otra monja esta vez ecuatoriana fue Gertrudis de San Ildefonso Nacida en 1652 profesoacute su vocacioacuten en el convento de Santa Cruz de Quito dejando escrita su vida por mandato de su confesor el padre Martiacuten de la Cruz el cual hizo una biografiacutea laquoen tres gruesos voluacutemenesraquo Gertrudis de San Ildefonso murioacute en 1709 (Serrano y Sanz 270 300) en olor de santidad

Sor Mariacutea Ana Agueda de San Ignacio nacioacute el 3 de marzo de 1695 en la dioacutecesis de la puebla de los Angeles en un rancho del lugar de Santiago Tecaliacute (Serrano y Sanz 270300) Esta monja mexicana escribioacute varias obras durante su vida conventual a lo largo de la cual desempentildeoacute el cargo de priora por muchos antildeos Entre sus obras todas de caraacutecter piacuteo y de laquoamor divinoraquo escribioacute un curioso y laquocopiosoraquo tratado de la Leche virginal de la Soberana Madre de Dios El padre Fr Juan de Villa Saacutenchez hace el siguiente comentario al respecto laquoen que hablando primero en sentido natural de los beneficios que debemos a Nuestra Sentildeora pasa a tratar en sentido miacutestico y alegoacuterico enten-diendo en la leche la doctrinaraquo (Serrano y Sanz 270301) Mexicana fue tambieacuten Sor Petronila de San Joseacute que ejercioacute como abadesa del Real monasterio de Jesuacutes Mariacutea de la ciudad de Meacutexico Escribioacute Vidas de varias religiosas ejemplares obra que tiene su im-portancia ya que al parecer laquoDe esta obra se sirvioacute D Carlos de Siguumlenza y Goacutengora para escribir su Parayso Occidental (Meacutexico 1684) seguacuten eacutel mismo declara en el proacutelogo diciendo lsquoa quien si hay algo bueno en esta historia se le debe todorsquoraquo (Serrano y Sanz 270 354) Menos conocida fue su compatriota Sor Luisa de Santa Catalina natural de Xacona laquopueblo situado en las inmediaciones de Zamora (Meacutexico)raquo siendo bautizada en 1682 Escribioacute Cartas espirituales a su confesor el P Juan Loacutepez de Aguado (Serrano y Sanz 270 361-62)146

Todos estos escritos la mayoriacutea de ellos ignorados por el gran puacuteblico tienen la im-portancia de darnos una perspectiva diferente En otras palabras ensentildearnos la maacutes refinada sensibilidad de muchas mujeres que permanecieron y en su mayoriacutea siguen permaneciendo a laquooscurasraquo de una eacutepoca tan rica de la literatura espantildeola como fue el Siglo de Oro Este siglo fue tambieacuten en su dimensioacuten literaria y artiacutestica patrimonio de la mujer

146 Para profundizar en muchas de estas escritoras hispano-americanas la consulta de la Biblioteca Hispano-Americana de Beristain de Souza resulta de capital importancia

169ESPANtildeOLAS DE ULTRAMAR EN LA HISTORIA Y EN LA LITERATURA

Sor Nada ardores divinos de una monja adolescente escritos ineacutedi-tos de una recieacuten profesa del siglo XVI147

iexclQueacute encantadores son tus amores hermana miacutea espo-sa iexclQueacute deliciosos son tus amores maacutes que el vino Y el aroma de tus perfumes es mejor que el de los baacutelsamos Miel virgen destilan tus labios esposa miel y leche hay en tu lengua y el perfume de tus vestidos es como aroma de incienso (Cantar de los Cantares 4 10-11)

Sor Nada llamada asiacute por humildad seguacuten dice el Indice de manuscritos de la Biblio-teca Nacional de Madrid es uno de los ejemplos maacutes desconocidos e interesantes que tenemos de la poesiacutea y prosa amoroso-religiosa del siglo XVII Hasta la fecha nunca se habiacutea publicado su obra e incluso hasta el antildeo 1995 para mi sorpresa no habiacutea copias microfilmadas de sus manuscritos en la Biblioteca Nacional Serrano y Sanz en su libro Apuntes para una Biblioteca de Escritoras Espantildeolas hace una escueta y pasajera mencioacuten de esta mujer y de su obra (68-69) siendo eso todo lo que hasta ahora se sabiacutea de ella Sus escritos consisten en los siguientes manuscritos

1 laquoEn queacute consiste un verdadero amor de Diosraquo 9 hojas uacutetiles en 4ordm letra del siglo XVII Biblioteca Nacional de Espantildea Manuscrito 1295926

2 laquoPintura del Propio Amorraquo laquoPintura del propio Amorraquo 10 hojas uacutetiles en 4ordm letra del siglo XVII Biblioteca Nacional de Espantildea Manuscrito 1295927

3 laquoEsplicacioacuten sobre en queacute consiste la paz del Almaraquo laquoQuartillas aacute un Alma que padece soledad interiorraquo 7 hojas uacutetiles en 4ordm letra del siglo XVII Biblioteca Nacio-nal de Espantildea Manuscrito 1295828

En cuanto a su persona soacutelo se nos dice que laquose encubrioacute con este seudoacutenimo laquoSor Nadaraquo Esta monja desconocida de origen hispanoamericano posee toda la frescura e ingenuidad de una joven apasionada metida por vocacioacuten u obligacioacuten a ejercer la profesioacuten maacutes comuacuten para mujeres de cierta clase social de su tiempo En sus liacuteneas podemos encontrar un misticismo simple incluso en algunos momentos infantil pero a su vez lleno de una fuerza y sensualidad interior poco comuacuten en escritos de este geacute-nero que desborda los liacutemites del laquoamor divinoraquo a traveacutes de los diaacutelogos entre el Alma y el Esposo Sor Nada consigue proyectar su amor a Dios maacutes allaacute de una experiencia romaacutentica Su experiencia es sincera y genuinamente miacutestica trascendiendo la imita-cioacuten o la propia creacioacuten poeacutetica ficcionalizada (Hatzfeld 30) Algunos pasajes son de un

147 Veacutease mi artiacuteculo Sor Nada ardores divinos de una monja adolescente escritos ineacuteditos de una monja profesa del siglo XVIIraquo Espeacuteculo Revista de estudios literarios 26 (2004) 1-10 Universidad Complutense de Madrid http wwwucmesinfoespeculonumero26sornadahtml

170 JUAN FRANCISCO MAURA

alto contenido eroacutetico con sustantivos y metaacuteforas que recuerdan la maacutes iacutentima unioacuten amorosa en unos casos y el tierno amor maternal en otros

[T]e miro Jesus mio desnudo a las inclemencias del tiempo y ardien-do en puro fuego de Amor por la salud de las Almas y me ensentildeas a que te ame con todo mi corason y puresa de espiritu No atendiendo ni buscando umanos intereses ni a solisitar consuelos ni regalos espi-rituales que suelen empantildear la puresa del noble corason No mi Jesus amable pues antes me ensentildeaste tu puro Amor que desnudo sean [sic] de encaminar mis passos desde el pesebre asta la cuna en donde te miro tan desnudo como el pesebre y todo Sentildeor por mi Amor (Mss 12959 26 hoja 1 v)

El manuscrito (12959 27) de la mencionada serie de tres contiene algunas correccio-nes quizaacute hechas por el confesor o quizaacute por ella misma cuando se dirige con excesiva familiaridad y arrebatado fervor a su Amado148 He escogido el manuscrito (12959 Caja 28) en primer lugar por ser el ejemplo maacutes representativo de su poesiacutea y prosa En este manuscrito encontramos de forma maacutes directa que alegoacuterica toda la frescura de un diaacutelogo entre Jesuacutes y el alma que raya como diriacutea Cervantes laquoa la llana y sin rodeosraquo (667 lib 2 cap 38) con el doloroso y a veces desesperado deseo de la entrega y la unioacuten final con el Amado La ortografiacutea no ha sido corregida respetaacutendose el texto ori-ginal149 Veamos el siguiente fragmento

Mira que te amo con Amor de padre y con Amor de esposo el mas fino y puro enamorado que no tan solo me presio de darte mi mano sino tambien todo mi cuerpo y sangre para que con mi pan de vida te sustentes y te regales a tus anchuras y que con mi propio espiritu vivas en paz como tu lo deseas y que mis amores sean unico alivio en tus trabajos en esta mortal vida pues si esto es asi y sabes que muero por darte vida dime esposa mia de que te fatigas Dame querida tus bras-sos y dime si me amas como yo te amo (Hoja 4)

148 La antologiacutea de Promis ha procurado insertar entre los textos antoloacutegicos algunos que se refieren a la es-critura de mujeres fundamentalmente de aquellos generados en el interior de los espacios conventuales Estos textos se fundan como laquohistorias de vidasraquo y responden casi siempre a los requerimientos de los confesores de las monjas coloniales En este sentido resulta valiosiacutesima la incorporacioacuten de la llamada Relacioacuten autobiograacute-fica de Sor Ursula Suaacuterez como una muestra significativa de la escritura monjil entendida en esta eacutepoca (como tambieacuten en la tradicioacuten europea medieval) inserta en las denominadas laquolabores de manoraquo de las religiosas ya que el texto escrito por mandato se convertiacutea en una suerte de entramado o tejido linguumliacutestico es decir en un nuevo bordado que la mayor parte de las veces el confesor convertido en censor iba haciendo tachando y enmendando En la antologiacutea Promis agrega un texto de Sor Tadea Garciacutea de la Huerta titulado Relacioacuten de la inundacioacuten que hizo el riacuteo Mapocho de la ciudad de Santiago de Chile en el monasterio de Carmelitas titular de San Rafael el diacutea 16 de junio de 1783 se trata de un poema tipo romance escrito en versos octosilaacutebicos y que da cuenta de lo sucedido ese diacutea en el convento (Resentildea de la literatura del reino de Chile de Joseacute Promis Eddie Morales Pintildea httpwwwupaclpublicaciones2002literatura_promishtm)

149 Son frecuentes las faltas ortograacuteficas Una de ellas es el uso constante del seseo La ausencia de acentua-cioacuten y puntuacioacuten exceptuando alguacuten punto o coma arbitrario no seguido casi nunca de mayuacutescula inicial lo mismo que el uso igualmente aribitrario de la h o de b v r q g j m n x etc No olvidemos de la misma forma la laxitud linguumliacutestica existente en el siglo XVII (no sabemos a queacute parte de eacuteste pertenece el manuscrito) asiacute como la joven edad de la monja

171ESPANtildeOLAS DE ULTRAMAR EN LA HISTORIA Y EN LA LITERATURA

Los versos del presente manuscrito poseen la misma fuerza que tiene su prosa Con una estructura estroacutefica indefinida estaacuten aparentemente corregidos por alguien que tu-vo la oportunidad de conocer personalmente a la autora Muy probablemente se trate del padre al que hace referencia al principio del primer manuscrito laquoMandame el Pd que le declare en que consiste un verdadero amor a Diosraquo a continuacioacuten continuacutea con su caracteriacutestica humildad laquo[O]bedesere y dire lo q Dios me inspire segun mi rudesa y simplisidadraquo (Mss 12959 26) En cuanto a la fuerza pasional de esta joven observamos con cierta tristeza coacutemo aparece sublimada en sus escritos con toda la enegiacutea de una joven mujer llena de intensidad y vida pero encerrada en los liacutemites de un convento Veamos un ejemplo en donde responde el Alma en los siguientes versos

O mi enamorado Jesus O mi dulse y tierno amanteO alegria de los sielos O dulse Jesus amable

(Toda Sentildeor me derrito toda Sentildeor me desagoy quiero vivir por ti ea sentildeor abrasadme) [Tachado en el original]

Toda Sentildeor me derrito toda Sentildeor me desagoy quiero morir por vos ea Sentildeor que ya acabo

Ya tus amores me llaman ya tus perfumes me traencon suspiros y agonias Sentildeor hasta que te alcanse

O mi Jesus amoroso no puedo mas dilatarmeya la pasiensia me falta dulse Jesus abrasadme

(No puedo vivir sin vos no puedo mas dilatarmeya la pasiensia me falta dulse) [Tachado en el original]

No puedo vivir sin vos mi dulse Jesus amablepues me teneis echisada siendo mi esposo y mi Padre

Ay que me abraso Ay que me quemo del Amor deJesus nasareno como no tocan y tantildeen a fuego150

Estos versos llenos de arrebato sublimado conectan con toda la tradicioacuten miacutestica es-pantildeola que se remonta a Ramoacuten Llul y que culmina en el maacutes universal de nuestros

150 En toda la fuerza y simbologiacutea del amor maacutes iacutentimo del maacutes alto y sublime placer de la unioacuten de los amantes tal como lo encontramos en el Cantar de los Cantares y en San Juan de la Cruz Leemos en la Biblia

Ya me he quitado la tuacutenica iquestCoacutemo volver a vestirme Ya me he lavado los pies iquestCoacutemo volver a ensuciarlosMi amado metioacute su mano por el agujero (de la llave) y mis entrantildeas se estremecieron por eacutel Me levanteacute para abrir a mi amado Mis manos destilaron mirra y mis dedos mirra exquisita en el pestillo de la cerradura (5 3-5)

Nos ocurre lo mismo con San Juan de la Cruz en su insuperable poema laquoLlama de amor vivaraquo

iexclOh cauterio suaveiexclOh regalada llagaiexclOh mano blanda iexclOh toque delicadoque a vida eterna sabey toda deuda pagaMatando muerte en vida la has trocado

172 JUAN FRANCISCO MAURA

miacutesticos San Juan de la Cruz Esta tradicioacuten se extiende hasta finales del siglo XVII esto es hasta los finales del Barroco siendo un poco maacutes tardiacuteo en la Ameacuterica espantildeola Sin tener como propoacutesito discutir en el presente trabajo a queacute corriente miacutestica pertenece la obra de Sor Nada es necesario resaltar no obstante el hecho de que estaacute escrito por una mujer y ademaacutes de tierna edad El manuscrito 12959 Caja 26 termina con estas pa-labras laquo[T]odas estas boverias escrivi por entretenimiento siendo resien profesa en la religion Sor Nadaraquo Mas no por la juventud de su autora los escritos dejan de tener lo-gradas metaacuteforas imaacutegenes y siacutembolos sacados de la naturaleza La alegoriacutea de la unioacuten matrimonial poseeacute el fuego liacuterico de la maacutes apasionada de las relaciones amorosas vivi-ficada por perfumes flores insectos animales escarchas nieves o abrojos Por lo tanto aunque la narracioacuten destile cierta ingenuidad no carece por ello de un vocabulario rico con el sabor popular de la poesiacutea de los cancioneros y romances de tradicioacuten renacen-tista No ha sido otra mi intencioacuten que la de rescatar del olvido unos escritos en prosa y en verso llenos de frescura y espontaneidad que nos muestran la pasioacuten con que la joven novicia se laquoentrega en cuerpo y almaraquo a los menesteres de su profesioacuten guiada por un padre espiritual en esos primeros antildeos de formacioacuten Esta ha sido la razoacuten por la que presento a continuacioacuten el citado manuscrito en su totalidad

Sor Nada (Mss 1295928)

laquoEsplicacion sobre en que consiste la paz del AlmaraquolaquoQuartillas a un Alma que padece soledad interiorraquo

[7 hojas utiles en 4ordm letra del siglo XVII]

+

Esplicacion sobre en que consiste la paz del Alma

Pareseme segun mi rudo entender que la verdadera paz del Alma con-siste en una muy pura y buena consiencia en un corason liso y bien intensionado en una verdadera rectitud de espiritu en el qual el Alma procura bolar a Dios sin jamas detenerse a respetos umanos ni reparar en que me diran ni de que me censuraran sino me apresuro a seguir a unos entenderes y pareseres dorados en los quales pretende el mundo engantildear y ensuciar si se puede la puresa de un corason unicamente de Dios y de su Santa ley y se lo conserva cristalino con la divina asis-tencia de la gracia y comprendido de su Amor y temor siguiendo la luz divina de tan amante Sentildeor Dios y ombre verdadero con que este ilustrado corason ni se altera ni se mueve por los disfrasses dorados que ase el mundo y sus moradores mayormente con falssas amistades aunque con ellos muestre buena intension Con la misma grasia y luz de Dios conose el buen corason estos disfrasses que le ase el mundo y se retira de todo con espiritu y valor esto sin la menor alterasion sino que en suma paz se retira a buscar a Dios dentro de su mismo corason

173ESPANtildeOLAS DE ULTRAMAR EN LA HISTORIA Y EN LA LITERATURA

y se abrasa con su pura verdad en la qual se le descubren mil interio-res secretos tan solidos puros y verdaderos que la misma Alma queda abismada y de puro grandes no los puede bien comprender ni esplicar pero estos mismos secretos divinos le sirven de espuelas para no solo correr sino bolar con pies de plumas en seguimiento de su bien ama-do Jesus y como este soberano Sentildeor es tan amante de sus espossas las Almas luego que la ve bolar con pies de plumas la sale al encuen-tro en despoblado campo que se deve de llamar Campo de Amor de Dios y el mismo Sentildeor se viene a las manos por ser Dios que nos ama con Amor infinito de Padre benigno y amoroso con que asiendose en contra deso este divino enamorado en lo interyor de el Alma que le busca con ansias de servirle y amarle y en aquella soledad traban una conversasion amorosa y sensilla como la pluma simple de quien esto escrive

Divino enquentroDios y el Alma en la soledad

O Soberano Principe de la paz dise el Alma tus perfumes me traen a ti bolando porque alla en el mundo y sus valedores me pretendian engantildear y entretenerme con pegaminossas amistades que facilmen-te me pudieran envenenar y matarme apartandome de ti Mi dulse Jesus amable mi Redentor Soberano que con tantas ansias me sales al enquentro como siervo [ciervo] erido de mis Amores los quales tu Amor me ofrese para que con tu mismo Amor te ame y te sirva en paz sin perturbarme ni contristarme ni cansarme de padeser pasando si se ofrese por escarchas nieves espinas ni abrojos ni por otros diverssos trabajos ni piedras de contradision que tu me puedes permitir pues por mas que el mar se levante con sus ferosses olas contra mi ni piedras se me tiren al rostro en todo Sentildeor me quieres con serenidad pasifica sin la menor perturbasion Todo Sentildeor quieres que lo tome con Serenidad de espiritu y asi vengo a ti bolando para que mejor me ensentildees a vivir segun las leyes de tu noble condision que me son muy agradables por mas que el mundo me las despresie por segir sus vanidades y torsidas intensiones con apariensias de bien y con este engantildeo y bien me quie-ro mas a mi que no a mi proximo veo que segun mi pareser se pierden muchas Almas y tambien de aquellos que se depresian y pasan por muy espirituales Con que me paresen pocos los que llegan a padeser con desnudes151 de espiritu por tu purisimo Amor y me parese essas se quedan muy atrasadas en la virtud por el peligro de bolver muy atras el paso de modo que se pueden despentildear y pereser en su misma desgra-sia ya por soberbia o por otras enfermedades que se les pega al corason y asi lo pasan como siegos ignorantes sin advertir en sus peligros

151 La letra en cursiva es miacutea

174 JUAN FRANCISCO MAURA

este aquerdo Sentildeor y otros que tu verdad me ensentildea me ase venir uyendo de las paredes del mundo y me vengo a ti Dios mio bolando con las dos Alas del Amor y temor que tu mismo Amor me ofrese tan de gracia y tan de grado que no se duentildeo mio con que lo responder a tan soberano beneficio y finesa de tus entrantildeas de Amorvengo Sentildeor y esposo mio unicamente a descansar en ti pues los peli-gros del camino me an puesto en mucho sobresalto temiendo el per-derte y sin ti perderme para siempre por una eternidad sin fin pues deseo amado mio ganarme ganandote a ti y vivir en ti aora en vida y despues eternamente y estos cuidados me traen fatigada molida y cansada y no podre tener alivio y descanso sino viendome entre tus brassos aunque sea estando en cruz pues ese es el fin de mis deseos vivir y morir en ti ablame mi cordero manso y ensentildeame a que ver-daderamente te ame como fiel esposa ea mi caro amigo dame la ma-no pues sabes Amor mio que en mi no ay mano sin tu misma mano y asi mi Dios y Sentildeor mi Principe Soberano con umilde rendimiento y deseos de alcansarte te suplico me des la mano y me consueles en estos mis trabajos Deseo Sentildeor vivir en paz y los malos amores de mi Naturaleza flaca no me dejan detentar y no quieren por mi desgrasia atropellar con las leyes de tu Amor ni quisiera perturbar mi corason quando me veo con un torvellino de olas y contratiempos que a menu-do me suelen sercar pero si tu Sentildeor me das la mano nada temo sino que me aseguro y vivire en paz sin que me fatiguen los contratiempos pues mi mano en la tuya y mi espiritu en el tuyo por mas borrascas que me envistan no seran bastantes para rendir mi voluntad a la suya bien si para pronunsiar un fiat que resuene bien atras en tus oidos y que en medio de mis fatigas me ponga a cantar tus divinas misericor-dias hea Sentildeor ya pretendo serrar mis labios por no desir mas bove-rias y deseo Sentildeor oir tus palabras de vida eterna abla Sentildeor que tu sierva oye con atension y cuydado mira mi Dios que se me ase tarde y espero con prisa deseando saborearme y aprovecharme de los ecos de tu Santa dotrina pues todas tus palabras saben a eterna vida callen pues mis sentidos y potensias y todo se ponga en paz pues mi dulse y soberano Sentildeor no se escusara de ablar me aun que en mudo silensio hea mi gran Prinsipe de la paz ablame que tus puros amores me traen perdida por estos asperos montes y mis cortos pasos no te pueden dar alcanse mirame mi Dios a tus pies postrada como un vil gusano y me-nor ormiga de la tierraabla Jesus y dise a su esposa el Alma querida esposa mia que me pides y por que te muestras tan fatigada y mal sufrida no vives como corde-rita del campo buscando de mis pechos el sustancial pasto mi Amor no te sustenta y mi grasia te promete eterna vida pues dime amada de que te fatigas y te muestras mal sufrida mira que te amo con Amor de padre y con Amor de esposo el mas fino y puro enamorado que no tan solo me presio de darte mi mano sino tambien todo mi cuerpo y

175ESPANtildeOLAS DE ULTRAMAR EN LA HISTORIA Y EN LA LITERATURA

sangre para que con mi pan de vida te sustentes y te regales a tus an-churas y que con mi propio espiritu vivas en paz como tu lo deseas y que mis amores sean unico alivio en tus trabajos en esta mortal vida pues si esto es asi y sabes que muero por darte vida dime esposa mia de que te fatigas Dame querida tus brassos y dime si me amas como yo te amoResponde el Alma152 Tu mi Dios sabes si yo te amo pues de mi solo se que mis deseos y ansias buelan a ti mas no alcanso a saber si te amo como tu de-seas ser amado y como desconfio tanto de mi y de mis prosederes falssos temo Dios mio perderme y perderte y asi Sentildeor pues no desechas mis Amores y te muestras tan fino en amarme te pido me ensentildees a vivir segun las leyes de tu pura verdad y fina condisionhija mia dise Dios la prueva de un verdadero Amor consiste en sufrir callar y padeser por mi unico Amor y en todo seguir mis pasos sin ja-mas retroseder por mas fragoso que se muestre el camino pues nunca seran tantas las espinas las escarchas ni las nieves ni los vientos bo-rrascosos que te se ofrescan pasar por mi Amor como los que mi tierno y desinteresado Amor paso por ti y siempre con mis pies descalssos y asi hija y esposa mia muestrate costante en seguir lo perfecto de mis passos pues mi braso fuerte sera en ti y peleara por ti y te sera el todo en tus nesesidades y mi Amor te convertira en dulse y suave lo amargo y molesto a la condision de la carrne

Responde el Alma

O mi enamorado Jesus O mi dulse y tierno amanteO alegria de los sielos O dulse Jesus amable

(Toda Sentildeor me derrito toda Sentildeor me desagoy quiero vivir por ti ea sentildeor abrasadme) [Tachado en el original]

Toda Sentildeor me derrito toda Sentildeor me desagoy quiero morir por vos ea Sentildeor que ya acabo

Ya tus amores me llaman ya tus perfumes me traencon suspiros y agonias Sentildeor asta que te alcanse

O mi Jesus amoroso no puedo mas dilatarmeya la pasiensia me falta dulse Jesus abrasadme

(No puedo vivir sin vos no puedo mas dilatarmeya la pasiensia me falta dulse) [Tachado en el original]

No puedo vivir sin vos mi dulse Jesus amablepues me teneis echisada siendo mi esposo y mi Padre

152 La aparicioacuten de una mayuacutescula al principio de una oracioacuten es algo totalmente arbitrario en este ma-nuscrito dada la libertad ortograacutefica de la autora Como se puede observar en la mayor parte de las veces no es el caso

176 JUAN FRANCISCO MAURA

Ay que me abraso Ay que me quemo del Amor deJesus nasareno como no tocan y tantildeen a fuego

Responde Jesus Hija mia tus simples vozes oygo y aunque resuenan bien a mis oidos pero te deseo mas mansa y pasifica en tus fervores ya sabes que no siempre as de vivir en mantillas ni a los pechos de tu Madre por que es rason que padescas con espiritu fuerte como mu-jer valerosa por que a una esposa del Rey soberano y prinsipe de la paz no le estan bien chiquerias ni fervores de nintildea malcriada y ya es ora que la destete su Madre la Naturaleza y que empesando su nueva vida camine con el favor de mi grasia sigiendo mis passos de eterna vida esto con sus pies descalssos segun mis leyes de Amor puro y desinteresado lo tienen ordenado153 y vivir en paz como lo deje en-cargado a mis apostoles Santos repitiendoles varias vezes Vivir en pas y caridad esto es un vivir en Dios y Dios en el Alma y asi hija mia el Alma que vive en paz vive en mi Como mis cortesanos en el cielo y pues me pides que te ensentildee a vivir segun las leyes de mi condision Repito el desir que te debes mostrar sufrida en todo tiempo y estado sin permitir en tu corason que ni aun los fervores se adelanten con estremos ni ademanes sino atiende y aprende de mi purisima Madre pues siempre la veras si bien lo consideras que mientras vivio en el mundo en todos sus trabajos se mostro firme fuerte costante como piedra diamante Pues mirandome nintildeo entre sus brasos desnudo en el pesebre desnudo y crusificado en los brassos de una cruz En estos y otros passos no se mudo su rostro sino que en suma serenidad y pasifico corason toda se sacrificaba enteramente en los brassos de mi Amor y rendido su corason y voluntad en la de mi eterno Padre por ejemplo te la doy y deseo que aprendas de sus nobles calidades pues te aseguro carisima que las leyes de mi condision y pura verdad todo lo allaras enserrado en el corason de mi purisima Madre sedle fiel y descansaras en paz

+

Quartillas a un alma que padese soledad interior

1Un Alma afligida y tristese ve en un campo desiertay en el su esposo la tieneAtormentada y sedienta

153 Es a traveacutes de estas liacuteneas lo que hace suponer que la autora de este diaacutelogo amoroso entre el Alma y Je-suacutes es novicia esto es laquoque estaacute empesando su nueva vidaraquo En las mismas liacuteneas una vez maacutes se hace alusioacuten al laquodesteteraquo de su vida civil laquoa una esposa del Rey soberano y principe de la paz no le estan bien chiquerias ni fervores de nintildea malcriada y ya es ora que la destete su Madre la naturalesaraquo (fol 5)

177ESPANtildeOLAS DE ULTRAMAR EN LA HISTORIA Y EN LA LITERATURA

2Pendiente se ve en el AyreSolo un hilo la sustentasin tocar el pie en el sueloporque del no tome tierra

3Mirandola esta yto a ytoaquel sol que la atraviesay la enviste con sus rayosmas ella no pestantildeea

4Como sigarra padese y como a tal se atormentabatiendo sus mismas Alasy el corason se atraviesa

5Con penas sustos temoresquando se mira assi mesmasin tener valor en nadaporque es la misma flaquesa

6Pero el Amor de su esposotoda su atension le llevay la pone en un abismopero cubierto en tiniebla

7Desea dar algun bueloy subir con ligeresapero se mira travadacon una fuerte cadena

8Clama suspira y padeseMas del todo se sujetaRindiendo su voluntadA la divina clemencia

9Los enemigos del AlmaCruelmente le asen guerray ella aunque firme y constantelos reselos la atormentan

178 JUAN FRANCISCO MAURA

10de todos modos padeseaunque gosa la asistensiadel divino esposo amadoque en su interior se recrea

11Solo de verla penary con verla tan serenadise resibe mil gustosde su sigarra pequentildea

12Le sabe el mundo a mil yelesy su trato le atormentaviendo en el mil falsedadesque todas saben a tierra

13Para poderse librardeja de correr y buelacon las Alas del Amory el mismo Amor se la lleva

Una vida dedicada a un amor divino un amor que le haraacute llenar un buen nuacutemero de cuartillas dedicadas a tan alta empresa Se desconoce si la vocacioacuten de Sor Nada con-tinuoacute con tanta intensidad el resto de sus diacuteas Ciertamente la vida en el covento no era faacutecil En algunos casos la experiencia era traumaacutetica incluso fatal para algunas de las adolescentes de la Ameacuterica Espantildeola Las reglas del claustro eran severas por varias razones Estas joacutevenes si no teniacutean el permiso de la superiora no podiacutean recibir visitas no podiacutean volver a sus casas su correspondencia era censuraba y no podiacutean salir del periacutemetro conventual Igualmente se levantaban antes del amanecer para oir misa tra-bajaban el resto del diacutea y lo maacutes interesante es que muchas veces esta vida era aceptada por muchas

Page 6: Tercera parte: Mujeres en la vida intelectual - …parnaseo.uv.es/Editorial/Maura/TerceraParte.pdf · La Biblia, por su parte, hace repetidas menciones de la mujer y sobre el comporta-

136 JUAN FRANCISCO MAURA

No es difiacutecil imaginar la repercusioacuten de esta argumentacioacuten si se hace de ella una inter-pretacioacuten literal sobre todo ante un pueblo de mayoriacutea analfabeta o poco instruida

Claro estaacute que seriacutea absurdo querer hacer un anaacutelisis literal de las palabras de las laquoSa-gradas Escriturasraquo Sin embargo eacutestas han influido e influyen en la sociedad occidental a un nivel maacutes elevado de lo que comuacutenmente se piensa a veces de manera incons-ciente De cualquier manera sin entrar en una comparacioacuten teoloacutegica entre el Yaveacute del Antiguo Testamento y Jesucristo en el Nuevo Testamento la diferencia que se hace del elemento femenino entre estos dos libros es laquonotableraquo Dice Yaveacute a Sauacutel laquoNo perdones mata a hombres mujeres y nintildeos aun los de pecho bueyes y ovejas camellos y asnosraquo Forma de pensar eacutesta que no concuerda con el laquoamor al proacutejimoraquo del Nuevo Testamen-to donde la venganza y el odio pasan a ser amor y resignacioacuten

En la Edad Media espantildeola existieron algunas leyes que teniendo como objeto a la mujer dejan entrever el derecho y las limitaciones con que eacutestas contaban en caso de abuso por parte de los hombres Un ejemplo de estos derechos o laquofuerosraquo podiacutean ser muy bien los de Jaca otorgados en el antildeo de 1077 por el rey Sancho Ramiacuterez Estos fueros en opinioacuten de Antonio Ubieto Arteta laquose extendieron a muchas poblaciones de Espantildearaquo Veacuteanse las siguientes claacuteusulas laquoK) Si alguien faltase con mujer con el consen-timiento de ella no siendo casada no pagariacutea multa pero si usase violencia deberiacutea tomarla por esposa o proporcionarle marido L) La mujer ultrajada deberaacute pedir justicia en los dos primeros diacuteas inmediatos a su deshonra presentando testigos Si pasan los tres primeros diacuteas sin reclamar ya no tendraacute derecho (Ubieto 135-36)

Observar el desarrollo que fue teniendo el papel de la mujer dentro de la sociedad especialmente de la espantildeola resulta sin duda interesante desde un punto de vista so-cioloacutegico Gracias a ello podremos comprender mucho mejor el posterior desarrollo de su participacioacuten en los acontecimientos de la eacutepoca que las tocoacute vivir y su posterior proyeccioacuten en el Nuevo Mundo siempre teniendo en cuenta el margen maacutes o menos estrecho que la Iglesia Catoacutelica y la mentalidad de la eacutepoca impusieron en mayor o menor grado a lo largo de diferentes periacuteodos Es por eso por lo que debemos indagar maacutes profundamente en todo lo relacionado con la actuacioacuten de la mujer en tierras de ultramar y sobre todo valorar sus acciones no como hechos marginales y esporaacutedicos sino como la base y los cimientos de una sociedad que todaviacutea sigue viva Son las voces de estas mujeres aquellas que se han podido rescatar el mejor testimonio Fueron las madres de los espantildeoles del siglo XVI dice Fernaacutendez Duro las que hicieron posible que en tan corto nuacutemero de antildeos se hiciese un derroche tan formidable de energiacutea en todos los mares y continentes de nuestro planeta

iexclQueacute grandeza queacute arrojo el de Espantildea en el siglo XVI Jamaacutes vio el Mundo energiacutea actividad y fortuna semejantes Para los espantildeoles no habiacutea obstaacuteculos en los riacuteos en las montantildeas ni en los desiertos Jun-taacutebanse unos cuantos creaban escuadras conquistaban imperios y fundando ciudades discurriacutean el modo de unir los mares y los climas Diriacutease que eran de procedencia de gigantes o de semidioses Eraneran hijos de tales madres (Duro 26)

Garcilaso de la Vega El Inca (1536-1616) cronista peruano hijo de un capitaacuten espantildeol y de una princesa inca tambieacuten se hace eco en su obra Historia general del Peruacute (segunda parte de sus Comentarios Reales) de la opinioacuten de algunas sentildeoritas que pasaron al Nuevo

137ESPANtildeOLAS DE ULTRAMAR EN LA HISTORIA Y EN LA LITERATURA

Mundo con la idea de encontrar al hombre de sus suentildeos en este caso al conquistador llevaacutendose una gran sorpresa al comprobar coacutemo las heridas las inclemencias del tiem-po y las enfermedades habiacutean dejado sus huellas en los rostros de estos hombres que no eran como se los imaginaban Este fue el comentario de una de las doncellas casade-ras que llevoacute don Pedro de Alvarado a Guatemala

iquestDicen que nos hemos de casar con estos conquistadores dixo una dixo otra iquestcon estos viejos podridos nos habiacuteamos de casar caacutesese quien quisiere que yo por cierto no pienso casar con ninguno dellos dolos al diablo parece que escaparon del infierno seguacuten estaacuten de estro-peados Unos cojos otros mancos otros sin orejas otros con un ojo otros con media cara y el mejor librado la tiene una dos y tres vecesraquo Dijo la primera laquoNo hemos de casar con ellos por su gentileza sino por heredar los indios que tienen que seguacuten estaacuten de viejos y cansados se han de morir presto y entonces podremos escoger el mozo que qui-sieacuteremos en lugar del viejo como suelen trocar una caldera vieja y rota por otra sana y nueva (Garcilaso vol 2 lib 2 cap 1 80)

Al escuchar estas palabras un caballero que se encontraba al otro lado de la cortina donde estaban hablando no pudieacutendolo sufrir maacutes las afrentoacute pasando luego a decir-les a los caballeros los laquobuenos deseosraquo de las damas Se marchoacute a su casa llamoacute a un cura y se casoacute con una india con la que ya teniacutea dos hijos a los que legitimoacute para que no pasasen a ser esclavos o criados de ninguna de esas sentildeoras (Garcilaso vol 2 lib 2 cap 1 81)

Muchas de estas primeras mujeres pasaron a ser viudas varias veces a causa precisa-mente de la muerte del marido en las diferentes campantildeas de los primeros antildeos

Fueron las descendientes de las mujeres que vinieron con los conquistadores las que de una manera definitiva asentaron las raiacuteces de una nueva sociedad que llegariacutea al mismo esplendor y refinamiento que la de la metroacutepoli El trasplante ya estaba realiza-do La violencia del laquoencuentroraquo de los primeros antildeos habiacutea dado como fruto una nueva sociedad que habiacutea heredado las bases de la cultura espantildeola y que teniacutea ademaacutes todo el encanto y riqueza de las variadiacutesimas culturas precolombinas

La primera generacioacuten corresponde ya a la mujer criolla hija de pobla-dora aquella que educoacute a los hijos propios y a los ajenos suavizando las costumbres baacuterbaras de la eacutepoca belicista Lo cierto es que a pesar de todas las vicisitudes la mujer hizo posible la creacioacuten del hogar en el que se fraguoacute la transculturacioacuten la sociedad gracias a su presencia fue perdiendo vulgaridad hasta alcanzar un notorio refinamiento Aun-que la paz tardoacute en llegar las treguas favorecieron el asiento en villas y ciudades En ellas florecioacute el romancero y la copla medieval junto a la arquitectura goacutetica el balcoacuten canario y el patio andaluz (Borges 436)

Ya fuese en la ciudad de Meacutexico o en la de Lima la mujer criolla gustaba de todas aquellas sofisticaciones que podiacutean disfrutar las mujeres de Sevilla o de la corte To-das teniacutean ademaacutes criados A mediados del siglo XVI empezaraacuten las navegaciones en-tre Meacutejico y las Filipinas lo que contribuiraacute a enriquecer los atuendos de las mujeres criollas asiacute como espantildeolas con artiacuteculos tan exoacuteticos en su diacutea pero tan castizos hoy

138 JUAN FRANCISCO MAURA

como el mantoacuten de Manila o el abanico Fray Reginal de Lizaacuterraga dice sobre las mu-jeres del Peruacute

La criolla es ademaacutes mujer que gusta de la ostentacioacuten y del lujo vi-cios muy femeninos que en parte la compensaban de pasadas o futu-ras calamidades En el Peruacute el vestuario se hizo tan ostentoso laquoque casi no se sabe coacutemo lo pueden sufrir los maridosraquo La soberbia de ellas es demasiada y no sabemos en lo que ha de parar no creo que hay en lo descubierto del mundo ciudad en su tanto ni cuatro veces mayor que a tanta soberbia en este particular como esta nuestra ciudad llegueCon justo tiacutetulo se podriacutea moderar por los virreyes esta soberbia Pe-ro no seacute por queacute no se modera y siacute seacute por queacute ni los maridos tienen aacutenimo para moderarlo ni los gobernadores tampoco (Lizaacuterraga 38 lib 1 cap 51)

La mujer criolla participa en todos los aconteceres de su sociedad Estaacute presente en todos los acontecimientos sociales y con frecuencia econoacutemicos sin dejar por ello de controlar la vida del hogar Al igual que en Espantildea ellas se encargaraacuten de casar a sus hijas e hijos unos destinados a mantener la tradicioacuten familiar y enriquecerla otros a engrosar las filas de la iglesia

Mujeres en la vida intelectual espantildeola durante los siglos XVI y XVII131

Great genuine and extraordinary work can be done only in so far as its author disregard the method the thoughts the opinions of his contemporaries and quietly works on in spite of their criticism on his side despising what they praise No one becomes great without arrogance of this sort (Shopenhauer The Art of Literature)

De igual manera que se ha querido excluir a la mujer de las primeras paacuteginas del encuentro con el Nuevo Mundo otro tanto ha ocurrido con la labor intelectual de tan insignes mujeres Muchas pese a lo remoto de sus asentamientos lograron dar a luz los maacutes valiosos frutos de la poesiacutea liacuterica de su tiempo132 Un gran nuacutemero de estas mujeres dada la estratificacioacuten social de su eacutepoca desarrolloacute su labor en conventos Otras sin embargo hicieron lo mismo compaginando sus vidas matrimoniales con las tareas culturales La vida monacal daba ventaja en cierta forma a la hora de conseguir la independencia deseada para dedicarse por completo al mundo de las letras sin que un

131 Veacutease mi artiacuteculo laquoCara y cruz de la mujer hispana imaacutegenes del siglo XVIraquo132 Veacutease el ejemplo de Mariacutea de Alvarado la Amarilis de Lope de Vega que escribioacute su obra en los maacutes

apartados rincones de los Andes peruanos Veacutease Meneacutendez y Pelayo Marcelino Historia de la Poesiacutea Hispano-Americana 84

139ESPANtildeOLAS DE ULTRAMAR EN LA HISTORIA Y EN LA LITERATURA

marido o unos hijos se interpusiesen en el tiempo concentracioacuten y dedicacioacuten que una actividad artiacutestica requiere Pese a todo no siempre fue asiacute El maacutes conocido ejemplo lo tendriacuteamos en Sor Juana Ineacutes de la Cruz la cual tuvo que sufrir problemas con algunos altos cargos eclesiaacutesticos asiacute como envidias de propios y extrantildeos por ser entre otras cosas superior en inteligencia y cultura a la mayor parte de sus contemporaacuteneos

Muchos conventos estaban bien provistos de libros a menudo donados por aquellas familias que teniacutean alguacuten miembro dentro del convento o simplemente por simpati-zantes de las diferentes oacuterdenes religiosas En la paz del claustro algunas de estas mu-jeres llegaron a adquirir un formidable desarrollo intelectual Pero a pesar de la calidad del material que existe sobre tan insignes mujeres se las ha preferido mantener en la oscuridad Como deciacutea con ironiacutea el pensador espantildeol Benito Feijoacuteo (1676-1764) sobre las disputas entre hombres y mujeres laquoLo cierto es que ni ellas ni nosotros podemos en este pleito ser jueces porque somos partes y asiacute se habiacutea de fiar la sentencia a los aacutengeles que como no tienen sexo son indiferentesraquo (46)

El escritor argentino Vicente G Quesada ya se quejaba a principios del presente si-glo de la pobriacutesima informacioacuten que ofreciacutea la enciclopedia francesa Larousse sobre la vida colonial en Meacutexico cuando refirieacutendose a eacutesta deciacutea lo siguiente laquoLos uacutenicos libros que se conociacutean eran el almanaque el catecismo del P Ripalda el Antildeo cristiano la vida de los santos y otros de ese geacuteneroraquo (Quesada 125) El mismo autor refutando lo anterior escribe

Por uacuteltimo recordareacute la notabiliacutesima publicacioacuten moderna La Bibliogra-fiacutea mejicana del siglo XVI eruditiacutesima y que constituye el maacutes concluyen-te testimonio para desautorizar la ligereza del Dictionnaire de Larousse que afirma lo que ignoraEl celebrado escritor mejicano don Francisco Pimentel ha publicado su erudita obra Historia criacutetica de la literatura y las ciencias en Meacutejico desde la conquista hasta nuestros diacuteas es un trabajo que comprende cuatro partes divididas asiacute Novelistas oradores historiadores y autores cientiacuteficos Por esta breve relacioacuten se comprende que es temeridad indisculpable pretender dar noticias del movimiento intelectual en el virreinato de Meacutejico sin conocer las obras de Pimentel y de Garciacutea Icaz-balceta ni la edicioacuten primitiva o corregida de Beristain (126)

En los maacutes importantes nuacutecleos urbanos de Meacutexico y Peruacute se podiacutea apreciar clara-mente la participacioacuten directa de la mujer en las maacutes diversas actividades sociales y cul-turales Esta participacioacuten llegoacute incluso al extremo de algunas mujeres que insultaron li-teralmente a las autoridades competentes cuando lo creyeron necesario laquoEstas mujeres que lloran seriacutean las mismas que creyeron como causa principal de aquellas muertes las disposiciones de las Leyes Nuevas porque no tuvieron empacho de insultar al virrey Blasco Nuacutentildeez Vela a quien lsquodieron gritasrsquo (sic) las espantildeolas y lo maldijeron como si llevara consigo la ira de Diosraquo (Borges 52) Lo mismo ocurre en la peniacutensula Dentro del plano cultural durante la primera mitad del siglo XVII destacaraacute entre los escritores de su tiempo Mariacutea de Zayas y Sotomayor gran novelista y defensora de los atributos de su sexo cuya obra narrativa y dramaacutetica disfrutoacute de una gran popularidad en la peniacuten-sula asiacute como en Hispano-Ameacuterica laquoCasi no ha habido novelista maacutes simpaacutetico a los lectores espantildeoles que Dontildea Mariacutea de Zayas seguacuten las muchas reimpresiones que se han hecho de sus obrasraquo (E Fernaacutendez de Navarrete xcvii) Entre sus admiradores contoacute

140 JUAN FRANCISCO MAURA

con el infatigable y genial Lope de Vega que la elogioacute en su obra El laurel de Apolo laquoNo desaprovechoacute Dontildea Mariacutea ninguna ocasioacuten de abogar por las mujeres contra la tiraniacutea de los hombres suponiendo que como deacutespotas las quieren ignorantes para tenerlas sujetasraquo (E Fernaacutendez de Navarrete xcvi)

Pero no tiene que ser exclusivamente una mujer la que defienda los atributos y los derechos de su sexo Se podriacutean citar varios ejemplos donde desde los inicios de las letras espantildeolas la mujer aparece comprendida e incluso defendida por escritores con-temporaacuteneos Veacuteanse los siguientes versos escritos en el siglo XIV por el genial Arcipres-te de Hita

Mujeres abrid los oiacutedos y escuchad una buena leccioacuten escuchad estas palabras guardaos del varoacuteniexclGuardaos no os acaezca como el leoacutenal asno sin orejas y sin su corazoacuten(892)133

No se puede despreciar la influencia que tuvo en la Espantildea del siglo XVI Erasmo de Roacutetterdam el intelectual maacutes reputado de su tiempo Erasmo con una clarividencia mental poco comuacuten trata de los temas maacutes cotidianos asiacute como de los maacutes profun-dos Sus escritos siempre al borde de lo hereacutetico dejaron bien claro su independencia ideoloacutegica Tambieacuten supo dar su opinioacuten sobre las mujeres y de la importancia que una buena educacioacuten supondriacutea a la hora de llevar a cabo las tareas diarias

With regard to female education Erasmus is unequivocal In Abbatis et eruditae he categorically states that education and learning are as desirable in a woman as in a man And although there is naturally no suggestion that the education and learning should be directed towards a career there are no carping restrictions as to what the education should consist of or where the learning should end (McKendrick 9)

Fue una mujer en particular la que llamoacute la atencioacuten del erudito holandeacutes Catalina de Aragoacuten hija de Isabel la Catoacutelica Grandes debieron ser las virtudes de esta dama cuando tan renombrados laquolibrepensadoresraquo la calificaban como laquomilagro del aprendi-zaje femeninoraquo

At the centre of the movement was a Spanish woman Catherine of Aragon first wife of Henry VIII of England Her mother Isabel la Catoacutelica had made sure that Catherine and her sisters received an advanced and enlightened education under two eminent Italian hu-manists Antonio and Alessandro Geraldini and Catherine herself was considered by Erasmus and Sir Thomas Moore to be a miracle of fe-male learning At her request Juan Luis Vives between 1524 and 1528 wrote his De institutione feminae christianae for her daughter Mary and he dedicated it to Catherine (McKendrick 6)

La pobre Catalina ya presagiaba su triste final Existe una dramaacutetica y muy poco co-nocida carta conservada en la Academia de la Historia donde eacutesta escribe a su sobrino el emperador Carlos V pidieacutendole ayuda y proteccioacuten a su desesperada situacioacuten en Inglaterra

133 Juan Ruiz Libro de Buen Amor 193

141ESPANtildeOLAS DE ULTRAMAR EN LA HISTORIA Y EN LA LITERATURA

Muy alto y poderoso sentildeor por las letras que a vuestra magestad e escrito a visto el tenor que siempre en este my negocio e tenido agora que veo el peligro que tanto tiempo lo e esperado torno a suplicar lo mismo que asta agora e echo y es que por permisioacuten de dios y por el deudo y sangre que entre vuestra magestad y my ay quiero de vos es-pecial memoria del peligro en que estoy y de los ynconvenientes que se espera allende que dios muy grande mire para ofendido si el Rey my sentildeor pone en efecto lo que todo este reyno tome en este parlamento de todo lo que para estar informado vuestra magestad por su embaxa-dor que aquiacute reside para el remedio tengo esperanza en dios bastaraacute lo que vuestra alteza proveeraacute conque se aga con tiempo no tengo maacutes que decir sino que todo ese reyno y maacutes los perlados y doctas personas que en esta causa defienden estaacuten muy sentidos de la dilacioacuten que su santidad del papa en este negocio a dado y quexanse mucho dello pues por vuestra parte nunca sino justicia se le a demandado y estaacuten el diacutea de oy tan firmes como asta agora para averlo de declarar donde fueren y debe ser entyendese esto poniendo la question como puacuteblicamente se platica que para en lo secreto no ay necesidad de ablar en ello y crea vuestra magestad de que esta verdad y dios me sostienen porque para proseguir mis trabajos no vastaraacute cuerpo humano y confiando en eacutel le suplico guarde la vida de vuestra magestad y acreciente su estado como yo deseo Degramache a 11 de enero= Humilde tiacutea de vuestra magestad= Catalina (RAH Atoacutegrafo precioso Caja 3 Nuacutem 23 Dontildea Catalina de Aragoacuten Reina de Inglaterra Antildeo 1530 Carta al emperador Carlos V pidieacutendole proteccioacuten)

La pobre Catalina presagiaba su triste fin ya que seis antildeos despueacutes la que fuera hija menor de los Reyes Catoacutelicos pasariacutea a mejor vida El no haber podido dar un hijo he-redero al rey Enrique VIII hizo que eacuteste se casase con Ana Bolena declarando nulo su matrimonio anterior sin consentimiento del Papa Roma le excomulgoacute pero eacutel mismo se proclamoacute jefe de la iglesia anglicana A pesar de todo Catalina muere enamorada de su marido y estas uacuteltimas liacuteneas con las que termina su uacuteltima carta y su vida son sufi-cientemente expliacutecitas laquoJuro que sobre todas las cosas mis ojos desean volver a verosraquo (Ximeacutenez de Sandoval 131)

Pese a la enorme influencia directa o indirecta que Erasmo tuviese sobre los pensado-res de la Espantildea del siglo XVI no debemos dejar de destacar tambieacuten la de Fray Luis de Leoacuten tanto por su cariz independiente como por ser un defensor de la libertad indivi-dual Auacuten siendo un representante de la iglesia Catoacutelica tuvo como se sabe que sufrir sus criacuteticas y el rechazo a la exposicioacuten de sus ideas escritos y traducciones biacuteblicas Fray Luis en su obra La perfecta casada deja clara su idea sobre la mujer y la funcioacuten que eacutesta debiacutea ocupar en la sociedad que le tocoacute vivir Para Fray Luis la mujer no era una imagen idealizada del laquoamor corteacutesraquo como la de los escritores neoplatoacutenicos sino un ser de carne y hueso con derechos y responsabilidades en la sociedad de igual manera que el hombre (McKendric 10)

Seriacutea exagerado afirmar que Fray Luis de Leoacuten pone a la mujer por encima del hom-bre en el contexto social Sin embargo y siempre teniendo en cuenta las limitaciones a

142 JUAN FRANCISCO MAURA

las que su profesioacuten y su tiempo le obligaban procura dejar claro que la mujer (casada) merece todo el respeto y ayuda que sea posible de su marido

Porque aunque es verdad que la naturaleza y estado pone obligacioacuten en la casada como decimos de mirar por su casa y de alegrar y des-cuidar continuamente a su marido de la cual ninguna mala condicioacuten de eacutel la desobliga pero no por eso han de pensar que ellos tienen licencia para serles leones y para hacerlas esclavas antes como en todo lo de-maacutes es la cabeza el hombre asiacute todo este trato amoroso y honroso ha de ser principio del marido Porque ha de entender que es compantildeera suya o por mejor decir parte de su cuerpo (Fray Luis de Leoacuten 21 cap 3)

En el reciente estudio de Mar Martiacutenez Goacutengora Discursos sobre la mujer en el Huma-nismo renacentista espantildeol se presenta esa posicioacuten ambigua del fraile agustino en refe-rencia a la funcioacuten de la mujer en la sociedad renacentista

Fray Luis se opone a la funcioacuten otorgada en la eacutepoca a la mujer de mera imagen pasiva Sin embargo fray Luis totalmente encardinado en la cultura del Renacimiento es consciente de la imposibilidad de ignorar ciertos presupuestos De ahiacute la frecuencia en la que el autor anima a las mujeres a buscar una laquofamaraquo puacuteblica que soacutelo una voz masculina puede proveerles Si la mujer desempentildea perfectamente su funcioacuten de casada el marido recibiraacute honra haciendo posible para ella ser alabada por los miembros de la comunidad (187)

Ya se ha mencionado a Isabel la Catoacutelica como impulsora de toda la empresa ultra-marina pero es precisamente gracias a su influencia cuando se pone de moda entre di-versas damas de su tiempo mdashsiglos XV y XVImdash la praacutectica de ciertos estudios y ciencias Beatriz Galindo conocida popularmente como laquoLa latinaraquo fue la que ensentildeoacute latiacuten a la reina Isabel Dice Juliaacuten Juderiacuteas en su obra La Leyenda Negra laquoA los hombres se unen las mujeres en este afaacuten de saber y vemos a Dontildea Beatriz Galindo maestra de latiacuten de la Reina a dontildea Luciacutea de Medrano que explicoacute los claacutesicos en Salamanca a dontildea Fran-cisca de Lebrija que desempentildeoacute una caacutetedra de retoacuterica en la Universidad de Alcalaacuteraquo (Juderiacuteas 74)

Nos cuenta Eustaquio Fernaacutendez de Navarrete que a la muerte del ceacutelebre Antonio de Nebrija quien a impulsos de la reina catoacutelica publicase la primera gramaacutetica europea en lengua romance su hija Antonia le supliacutea en las clases de filosofiacutea y retoacuterica en la Uni-versidad de Alcalaacute cuando eacuteste se encontraba ya viejo y enfermo (xcvi)

No existe ninguna razoacuten para pensar que las las mujeres de clases maacutes favorecidas que pasaron al Nuevo Mundo no disfrutaran de los mismos beneficios y libertades que sus homoacutelogas peninsulares Seraacute preciacutesamente uno de los hijos del mismo Antonio de Nebrija el doctor Sancho de Lebrija quien se encargue de dar poder a Antoacuten Pareja sastre para que la obra escrita de su padre tanto en latiacuten como en romance se distri-buya y venda laquoasiacute en Indias como en otras partesraquo (AHPS Libro del antildeo 1536 Oficio IV Fragmento de un libro Escribaniacutea Cristoacutebal Becerra Folio Primer tercio del legajo Fe-cha 31 de diciembre) En cuanto a las clases menos favorecidas la monarquiacutea espantildeola se preocupoacute desde un primer momento de alfabetizar a todos sus suacutebditos hembras y varones incluyendo los naturales de los territorios conquistados

143ESPANtildeOLAS DE ULTRAMAR EN LA HISTORIA Y EN LA LITERATURA

La educacioacuten de los indiacutegenas americanos fue una sincera preocupa-cioacuten de los reyes de Espantildea casi desde el descubrimiento del Nuevo Mundo Entre las primeras instrucciones de los Reyes Catoacutelicos a sus gobernadores de las Islas Antillas figuran las dadas a Nicolaacutes de Ovan-do en 1503 ordenaacutendole levantar en cada pueblo una escuela junto a la iglesia laquoen la que todos los nintildeos que hubiere en cada una de dichas poblaciones se junten dos veces al diacutea para que alliacute el capellaacuten les ensentildee a leer y a escribirraquo (Vega 9-10)

En la obra renacentista de Cristoacutebal de Villaloacuten El Crotaloacuten se ofrecen unas imaacutegenes muy graacuteficas de las mujeres de la eacutepoca y del laquoexceso de libertadraquo que seguacuten el autor en boca de uno de sus personajes disfrutaban Desde el punto de vista antropoloacutegico y social las siguientes liacuteneas ofrecen una buena imagen de la apariencia fiacutesica de las mujeres de su tiempo y de su actitud vista desde la perspectiva parcial del personaje de la obra

Pues aun no pienses Demophon que la vanidad y perdicioacuten destas livianas mujeres se le ha de pasar a Dios sin castigo que yo te oso afirmar por cosa muy cierta y que no faltaraacute Que por ver Dios su disolucioacuten desenvoltura desverguumlenza y poco recogimiento que en ellas en este tiempo hay visto que asiacute viacutergenes como casadas viudas y solteras todas por un comuacuten viven muy suelta y muy disolutas en su mirar andar y meneo muy curiosas y que por la calle van con un cu-rioso paso en su andar descubierta su cabeza y cabello con grandes y deshonestas crenchas muy alto y estirado el cuello guintildeando con los ojos a todos cuantos topan haciendo con sus cuerpos lascivos meneos (Villaloacuten 860-61 vol 2 canto 20)

El pasaje antes citado pese a parecer humoriacutestico en nuestros diacuteas no lo era tanto en la eacutepoca en que fue escrito ya que la visioacuten de la mujer como parte integrante del pa-trimonio del padre o del marido podiacutea de alguna manera poner en juego laquola honraraquo de su posesor Pese a esto se aprecia como la mujer teniacutea cierto margen de libertad que no se limitaba a las caacutemaras de un convento o a una vida totalmente alejada del mundanal ruido En la siguiente cita continuacioacuten de la anterior se puede observar la serie de ac-cesorios y aderezos que las mujeres de la eacutepoca utilizaban en sus vestidos y cuerpos llamando la atencioacuten la complejidad y sofisticacioacuten de los atuendos descritos

Por esta su comuacuten deshonestidad se cierto que vendraacute tiempo en el cual ha de hacer Dios un gran castigo en ellas pelarse han todos sus cabellos hacieacutendolas a todas calvas y seraacute tiempo en que les quitaraacute Dios todos sus joyeles sortijas manillas zarcillos collares ajorcas y apretadores de cabeza Quitarles ha los partidores de crenchas tenaci-cas salsericas redomillas y platericos de colores y todo geacutenero de afei-tes sahumerios guantes adobados sebos y unturas de manos y otros olores Alfileres agujas prendedores Quitarles ha las camisas muy del-gadas y los manteos vasquintildeas briales saboyanas nazarenas y rebo-cinos y en lugar de aquellos sus cabellos encrespados y enrifados les daraacute pelambre y calvez y en lugar de aquellos apretadores y joyeles

144 JUAN FRANCISCO MAURA

que les cuelgan de la frente les daraacute dolor de cabeza y por cinta de ca-deras de oro muy esmaltadas y labradas les daraacute sogas de muy aacutespero esparto con que se cintildean y aprieten y por aquellos sus muy curiosos y suntuosos ataviacuteos de su cuerpo les daraacute siacutelici y desta manera haraacute Dios que lloren su lascivia y desorden y que de su lujuria y deshonestidad hagan grave penitencia Entonces no habraacute quien las quiera por su he-diondez y miseria en tanto que siete mujeres se encomendaran a un varoacuten y eacutel de todas huiraacute menospreciaacutendolas y aborrecieacutendolas como de gran mal (Villaloacuten 860-61 vol 2 canto 20)

Excelente lista de aderezos femeninos de los cuales pocos son reconocibles en nues-tros diacuteas Gran frustracioacuten debiacutea de tener con las mujeres el autor de estas liacuteneas sien-do al parecer muy poco correspondido por estas uacuteltimas La misoginia que aparece en estas liacuteneas refleja cierta ingenuidad La mujer que se nos presenta debioacute de ser bastante atractiva y sofisticada portando una gran variedad de adornos muchos de ellos de origen oriental y de perfumes que poco tendriacutean que envidiar a los de la mujer moderna En Descripcioacuten breve de toda la tierra del Peruacute Tucumaacuten Riacuteo de la Plata y Chile obra escrita en Chile entre 1603 y 1609 por el padre Reginaldo de Lizarraga nacido en Medelliacuten (Espantildea) en 1545 y trasladado a Ameacuterica a los quince antildeos vemos una asombrosa semejanza con la cita anterior En esta obra del padre dominico dedicada al entonces presidente del Consejo de Indias conde de Lemos observamos coacutemo su descripcioacuten de la vestimenta de las mujeres de Lima ofrece notables semejanzas con la escrita unos antildeos antes en Espantildea En su capiacutetulo 51 titulado laquoDe los vestidos de las mujeresraquo dice lo siguiente

Lo que en esta ciudad [Lima] se admira mucho y aun lo que se ha-biacutea de refrenar es los vestidos y trajes de las mujeres son en esto tan costosas que casi no se sabe como lo pueden sufrir sus maridos La soberbia de ellas es demasiada y no sabemos en lo que han de venir a parar plegue a Dios y no sea en lo que pararon aquellas de quien dice Nuestro Sentildeor Porque las hijas de Sioacuten se ensoberbecieron (esto es las ciudadanas) cuando saliacutean de sus casas llevaban las gargantas ex-tendidas los ojos altos a una y otra parte guintildeaacutendolos los pasos muy compuestos el Sentildeor las volveraacute calvas y les raeraacute los cabellos de sus cabezas les quitaraacute sus chapines y jerbillas bordadas las medias lunas rodetes las cadenas y collares de oro las ajorcas los tocados costosos los punzones de oro para partir las crenchas los zarcillos y los olores los anillos y piedras preciosas etc y por los olores seles daraacute muy pes-tilencial olor y por las cintas de oro sogas de esparto etc No creo yo hay en lo descubierto del mundo ciudad en su tanto ni cuatro veces mayor que a tanta soberbia en este particular como esta nuestra ciu-dad [Lima] llegue acueacuterdome que los antildeos pasados maacutes ha de treinta y ocho que llegando un religioso nuestro de Espantildea nacido y criado en Toledo a nuestro convento de esta ciudad cerca de la fiesta de Cor-pus Christi tratando de ella y de la suntuosidad majestad y riqueza que aquel diacutea en Toledo en calles y ventanas se mostraba le deciacuteamos que no nos espantase porque en nuestra ciudad veriacutea coacutemo no le ha-

145ESPANtildeOLAS DE ULTRAMAR EN LA HISTORIA Y EN LA LITERATURA

ciacutea mucha ventaja Toledo Llegoacute la fiesta vio la riqueza que se mostroacute en los vestidos de las mujeres adornos de ventanas altares y calles dijo que la riqueza de Toledo en este diacutea mostrada no haciacutea muchas ventajas a la de esta ciudad Pues es cierto que hay tanta diferencia de entonces ahora en lo que vamos tratando como de vestidos de aldea a vestidos de corte con justo tiacutetulo se podriacutea moderar por los virreyes esta soberbia pero no seacute por queacute no se modera y siacute seacute por queacute ni los maridos no tienen aacutenimo para moderarlo ni los gobernadores tampo-co (Lizarraga 38 lib 1 cap 51)

Seriacutea injusto y exagerado afirmar que los descubrimientos transoceaacutenicos se hicieron por la presioacuten que ejercieron las mujeres sobre sus amantes para que estos les trajesen laquomaacutes raacutepidamenteraquo todo ese laquosin finraquo de delicadezas exoacuteticas de todo tipo que existiacutean en el Oriente Lo que siacute es cierto es que las mujeres fueron grandes consumidoras de perfumes afeites sedas joyas y otros bienes suntuarios siendo muy conscientes de lo que hoy entendemos como laquomodaraquo Martiacuten Fernaacutendez de Navarrete en su indispensa-ble trabajo sobre los primeros viajes transoceaacutenicos Coleccioacuten de los viajes y descubrimien-tos menciona de paso la situacioacuten de algunas mujeres durante el siglo XV Es precisa-mente esta eacutepoca en la cual portugueses y castellanos entran en conflicto por el control de algunas posesiones en las costas africanas

y crecioacute el lujo a tal extremo que aun las mujeres de los menestrales y artesanos se confundiacutean en los vestidos con las de alto linaje y esta-do usando ropas de ricas telas de seda de oro de lana con forros de martas y pieles y con guarniciones de oro plata y aljoacutefar cuyo gasto por ser ruina de las familias se tratoacute de corregir aunque sin efecto en las Cortes de Palenzuela (M Fernaacutendez de Navarrete 75 21)

El mismo autor resalta la importancia que tuvo para el comercio de Castilla el contar con una buena armada que protegiese a los barcos de piratas y otros peligros Gracias a los inventarios que se han conservado del duque de Beacutejar y de don Alvaro de Zuacutentildeiga conocemos el lujo de estos sentildeores en perlas orientales piedras preciosas telas y demaacutes utensilios de gran valor134 Existe una Real Pragmaacutetica de Fernando el Catoacutelico a Diego Coloacuten en donde aparece nuevamente la conciencia que se teniacutea sobre la manera de ves-tir que deberiacutean llevar las damas castellanas

R PRAGMAacuteTICA SOBRE EL VESTIR Y GASTAR SEDA EN LAS IN-DIAS Valladolid 12 de noviembre de 1509 Don Fernando etc A vos Don Diego Coloacuten nuestro Almirante y Gobernador de las Indias del mar Oceacuteano y a otro cualquier mi Gobernador etc Sepades que yo he sido informado de los muchos gastos y costas que se han hecho y facen y se esperan hacer si yo no lo mando proveer y remediar en el vestir y gastar de las sedas y brocados y bordados en la Isla Espantildeola y en las otras islas y poblaciones de las dichas islas del mar Oceacuteano tra-yendo en ello mucho desorden y yo por el amor y voluntad que tengo

134 AGI Indiferente 418 Libro 2 fol 87v Publicada en DH Am Tom 6 paacutegina 191 DIA Tomo 31 pag 470 DIU Tomo 5 paacuteg 166 Seguacuten la RC a Diego Coloacuten fechada a 14 de noviembre de 1509 es la pragmaacute-tica que se guarda en Castilla sobre la manera de vestir (DIU Tomo 5 paacutegina 174)

146 JUAN FRANCISCO MAURA

a esas dichas Indias y a los pobladores dellas y porque deseo que ellas se aumenten y acrecienten por las haber ganado y descubierto por la gracia de Nuestro Sentildeor con nuestra industria trabajo y costa y los po-bladores dellas no hagan sobre lo suso dicho tan excesivos gastos sino pues que van a ellas con deseo y voluntad de se ayudar y aprovechar del oro que por gracia de Nuestro Sentildeor se descubre de cada diacutea se detengan en lo gastar en semejantes cosas para se aprovechar dellos en otras cosas que maacutes les convenga asiacute para sus personas como para sus haciendas y por evitar y excusar lo suso dicho mandeacute lo platicar con algunos de mi Consejo y por ellos visto se halloacute que porque nuestros suacutebditos y naturales que viven y estaacuten en dichas Indias no gasten sus haciendas en semejantes desoacuterdenes y que las conserven y guarden pa-ra sus menesteres y por el bien y el pro comuacuten de todos generalmente mando dar esta mi carta premaacutetica sancioacuten la cual quiero y mando que haya fuerza y vigor de ley bien ansiacute y a tan cumplidamente como si fuese fecha y promulgada en Cortes por lo cual ordeno y mando que en cuanto a mi merced y voluntad fuere ninguna ni algunas personas de cualquier ley estado condicioacuten que sean que estuvieren de morada o vivienda o en otra cualquier manera en la dicha Isla Espantildeola y en las otras islas desas dichas Indias y tierra firme no puedan traer y traigan ropa alguna de brocado ni de seda ni de chamelote de seda ni zarzahaacuten ni tercenel ni tafetaacuten ni vainas ni correas de espada ni en cinchas ni en sillas ni en alcorques ni en cosa alguna ni tampoco puedan traer ni trai-gan bordados de seda ni chapado de plata ni de oro de martillo ni fila-do ni tejido ni de otra cualquier manera pero que las personas que tu-vieren en las dichas Indias bienes asiacute muebles como raiacuteces que valgan hasta la cuantiacutea de mil castellanos que ellos y los hijos que tuvieren de hasta edad de catorce antildeos traigan jubones y caperuzas y bolsas y ribe-tes y pestantildeas de seda de cualquier color que quisieren con tanto que en una ropa no traigan maacutes de un ribete y que no haya en los dichos ribetes y pestantildeas maacutes anchura de cuanto un dedo pulgar y que no se traiga en los ruedos de las ropas y que puedan traer becas de tercenel y de tafetaacuten y de papahigos de camino aforrados en el mismo tercenel y tafetaacuten y ansiacute mismo permitimos que puedan traer de seda las cora-zas y guarnecer las faldas y gocetes y capacetes y baberas y quejotes y traer cojines de seda en la silla de la jineta y que las mujeres de las tales personas que tuviesen bienes en la dicha cuantiacutea de los dichos mil castellanos y sus hijas siendo doncellas puedan traer gonetes y corseacutes y fajas de dos varas de largo de seda y [borradas dos letras por mancha de tinta] mas y de lo de vestir y mudar cuando quisieren y por bien tuvieren quier sea moyil o faldilla o cota o haacutebito u otra cualquier ropa con tanto que juntamente no puedan vestir ni vistan maacutes de una ni les pongan trepas ni tiras de seda ni de brocado ni de oro tirado ni tejido ni relido ni en las ropas de pantildeo pongan cortapisas ni lisonjas ni trepas ni tiras ni otra guarnicioacuten alguna de seda ni de brocado salvo que puedan traer un ribete o pestantildea de seda de anchura de un dedo pulgar asiacute en

147ESPANtildeOLAS DE ULTRAMAR EN LA HISTORIA Y EN LA LITERATURA

las ropas de seda como en las de pantildeo en los ruedos de las faldas y para las costuras y no otra cosa alguna y que no traigan la dicha seda en las guarniciones de las mulas ni en angarillas ni en sillas ni en pantildeos ni en otra cosa alguna y que ansiacute mismo no puedan traer mantillas de seda ni enforradas en seda sopena que l que contrario hiciere pierda las ro-pas que ansiacute trujere vestidas por primera vez y sea repartido la mitad para el juez que lo juzgare y la otra mitad para el juez que lo acusare y por la segunda que pierda la ropa y se parta como dicho es y sean desterrados de la isla donde viviere para dos antildeos y por cuanto algu-nas personas de los que nuevamente destos reinos de Castillaa van a se avecindar y poblar y estar en las dichas Indias y son de honra acae-ce que no llevan tantos bienes que valgan la dicha cuantiacutea de los mil castellanos que mando que tengan los que hubieren de traer seda en la manera que dicha es que a eacutestos tales no se entienda y extienda lo suso dicho y que puedan traer la dicha seda seguacuten y en la manera que dicha es y no maacutes hasta tanto que haya un antildeo que estaacuten en las dichas Indias que corra y se cuente desde el diacutea que llegare fasta ser cumplido y que siacute cumplido no tuviere bienes que valgan la dicha cuantiacutea de los dichos mil castellanos que no puedan traer seda ninguna so la dicha pena de suso contenida la cual mando a vos las dichas nuestras justi-cias y a cada una de vos que esta mi carta y todo lo en ella contenido y cada cosa y parte dello guardeacuteis y cumplaacuteis y ejecuteacuteis por manera que se cumpla y ejecute lo en ella contenido so pena de perdimiento de los oficios y que seades inhaacutebiles para haber otros semejantes y que pagueis la estimacioacuten de la tal ropa que dejardes de ejecutar y para que lo susodicho sea notorio y ninguno dello pueda pretender ignorancia mando que esta mi carta sea pregonada puacuteblicamente por las plazas y mercados y otros lugares acostumbrados desas dichas islas por prego-nero y ante escribano puacuteblico(Konetzke Coleccioacuten 23)135

Tambieacuten se sabe de las joyas que Rodrigo Ponce de Leoacuten marqueacutes de Caacutediz debioacute dar a dontildea Beatriz Pacheco (M Fernaacutendez de Navarrete 75 22) Lo que siacute queda claro es que la navegacioacuten seraacute a partir de estos antildeos la forma maacutes raacutepida e importante para comerciar con aquellos paiacuteses de Oriente que antes soacutelo era posible alcanzar a traveacutes de rutas terrestres Existe un documento muy representativo de este periodo sobre la posesioacuten de joyas de gran valor por parte de miembros de una de las familias maacutes repre-sentativas residentes en Ameacuterica Los protagonistas son en este caso el almirante Diego Coloacuten y su mujer Mariacutea de Toledo Dice el documento que El jurado Antoacuten Bernal y Juana de Hoces su mujer vecinos de Sevilla en la collacioacuten de Santa Cruz reciben de Diego Coloacuten Almirante de las Indias laquoun joyel muy rico de oro de hechura de escudo que tiene en medio una piedra preciosa grande esmeralda e debaxo de la dicha piedra un rostro de aacutengel labrado en el mismo oro esmaltado e a cada lado del dicho rostro una piedra preciosa diamante pura y debaxo una piedra gruesa pendiente que pesa el dicho

135 AGI Indiferente 418 Libro 2 fol 87v Publicada en DH Am Tom 6 paacutegina 191 DIA Tomo 31 pag 470 DIU Tomo 5 paacuteg 166 Seguacuten la RC a Diego Coloacuten fechada a 14 de noviembre de 1509 es la pragmaacutetica que se guarda en Castilla sobre la manera de vestir (DIU Tomo 5 paacutegina 174)

148 JUAN FRANCISCO MAURA

joyel con todo lo susodicho medio marcoraquo Los citados Antoacuten Bernal y su esposa se dan por pagados de todo lo que se les adeudaba y se obligan a su vez a devolver el joyel al Almirante si este les paga en dinero El 23 de agosto de 1530 siete antildeos despueacutes la virreina canceloacute la anterior obligacioacuten y recuperoacute el mencionado joyel (AHPS Libro del antildeo 1523 Oficio I Escribaniacutea Alonso de la Barrera Folio 1173 Fecha 3 de diciembre) En la misma casa del almirante otra mujer Briolanga Muntildeiz su tiacutea materna se obliga a pagar al mercader genoveacutes Batista Catantildeo 22 ducados de oro laquopor cierto raso que le comproacute y habiacutea de ser pagado en el puerto de Santo Domingoraquo (AHPS Libro del antildeo 1509 Oficio V Libro uacutenico Escribaniacutea Francisco Esquibel Folio Primer tercio del lega-jo Fecha 9 de marzo) Dontildea Briolanga recibiacutea cada antildeo para su mantenimiento 100000 maravediacutes del almirante mayor de las Indias por medio de Gaspar Gurricio monje del monasterio de Santa Mariacutea de las Cuevas (AHPS Libro 1510 Oficio XV Libro II Es-cribaniacutea Bernal Gonzaacutelez Vallesillo Folio primer tercio del legajo Fecha 4 de julio) Resulta interesante hacer notar la temprana presencia (1516) de un ingleacutes en Santo Domingo involucrado igualmente en la compra de telas Se trata de laquoNicolas Arnoteraquo residente en Santo Domingo que debe pagar a Mariacutea Caldera mujer del comendador Diego Barbosa el valor de una cama de sargas de colores de Flandes (AHPS Libro del antildeo 1516 Oficio XV Libro II Escribaniacutea Bernal Gonzaacutelez Vallesillo Folio Primer tercio del legajo Fecha 28 de agosto) Sin embargo anteriormente a esa fecha (1514) encontramos a un veneciano casado con una inglesa mucho maacutes ceacutelebre en sus viajes trasoceaacutenicos laquoSevastiaacuten Cavotoraquo capitaacuten del rey don Fernando y vecino de Sevilla136

De forma paralela se observa tambieacuten un cierto desenvolvimiento de la mujer en su medio lo que equivaliacutea a intercambios de informacioacuten a todos los niveles incluyendo por lo tanto el cultural No era extrantildeo que tuviesen libros de comedias a mano y que llegasen incluso a escribir comedias ellas mismas Efectivamente la sospecha de que las damas llegasen a escribir comedias estaba bien fundada Veacuteanse algunos ejemplos Ana Caro Malleacuten de Soto una de las maacutes famosas dramaturgas de la Sevilla del siglo XVII autora de El conde de Partinupleacutes utiliza el tema del amor en sus maacutes diversas variantes fiacutesicas y espirituales como el eje de casi todas sus obras (Perry 57) Este hecho por otra parte indica el favor del puacuteblico ante un tema tan popular Veacutease otro ejemplo

The drama of this period did not present love and marriage as a simple partnership however and many dramatists contrasted laquoprofaneraquo with laquohonestraquo love Feliciana Enriacutequez de Guzmaacuten who wrote Tragicome-dia Los jardines y campos sabeos in Seville in the early seventeenth cen-tury presented the hero Clarisel as the victim of laquopervertedraquo and fickle Belidiana in part 1 so blinded by her beauty that he feels himself laquoin shackles and in chainsraquo (Perry 57)

Pero las damas espantildeolas de esta eacutepoca no soacutelo escribiacutean comedias algunas tambieacuten se aventuraron a escribir tratados cientiacuteficos Uno de estos casos fue el de Oliva Sabu-co de Nantes Barrera que a finales del siglo xvi escribioacute un tratado meacutedico sobre la naturaleza humana advirtiendo que la lujuria podiacutea perjudicar al cuerpo Se basaba en

136 Sebastiaacuten Caboto o laquoSevastiaacuten Cavotoraquo estaba casado con Juana Cavoto vecina que fue de la ciudad de Londres en la parroquia de San Gil (AHPS Libro del antildeo 1514 Oficio I Libro II Escribaniacutea Mateo de la Cuadra Folio 253 Fecha 14 de Septiembre) citado en CFAAPS Vol 3 doc 128 p 37

149ESPANtildeOLAS DE ULTRAMAR EN LA HISTORIA Y EN LA LITERATURA

la presuncioacuten de que la lujuria provocaba que el cerebro emitiese un liacutequido que iba al estoacutemago enfriaacutendolo y debilitaacutendolo interrumpiendo de esta manera las funciones vitales (Perry 58)

Se sabe que en la eacutepoca de Isabel la Catoacutelica habiacutea muchas mujeres estudiantes y que la propia reina las impulsaba a estos menesteres iniciativa que obtuvo sus frutos en las deacutecadas siguientes Ademaacutes de las conocidas novelistas Mariacutea de Zayas y Sotomayor y dontildea Mariana de Carvajal existioacute toda una serie de escritoras de todos los geacuteneros lite-rarios que florecieron a ambos lados del Atlaacutentico y que no solamente llaman la aten-cioacuten por su nuacutemero sino por la calidad de sus obras Algunas de ellas como dontildea Luisa de Padilla condesa de Aranda calificada por Serrano y Sanz como laquola maacutes notable de cuantas florecieron en Espantildea en el siglo XVIIraquo personificaraacuten a la perfeccioacuten a este tipo de mujeres Tambieacuten deberiacuteamos saber cuaacutentas seriacutean las mujeres que escribieron con pseudoacutenimos masculinos

La informacioacuten sobre las diferentes facetas de la vida femenil con que contamos no es abundante A pesar de todo podemos hacernos una idea maacutes clara de la verdadera situacioacuten de la mujer a traveacutes de una nueva interpretacioacuten de los textos tanto de los medievales como de las croacutenicas de los primeros antildeos del descubrimiento y conquista Algunos estudios relativamente recientes surgidos por el intereacutes general que suscita todo lo concerniente a la mujer han ayudado a considerar nuevas perspectivas La eru-dicioacuten moderna estaacute poniendo en tela de jucio los estereotipos tradicionales en cuanto a la pasividad y relevancia femeninas asiacute como al tradicional misogenismo que se atri-buye a la eacutepoca medieval Cada vez estaacute maacutes claro que la existencia de estas mujeres variaba considerablemente seguacuten la eacutepoca posicioacuten social o situacioacuten geograacutefica por lo que hacer valoraciones categoacutericas sobre laquola situacioacuten de la mujerraquo puede llevar a graves equivocaciones (Dillard 9) Es fundamental para comprender a la mujer espa-ntildeola que pasoacute al Nuevo Mundo tener en cuenta las enormes diferencias de todo tipo que existieron en la sociedad castellana y novomundista Un pintoresco ejemplo es el de laquolas tapadasraquo una usanza de origen aacuterabe que se pondriacutea de moda en Castilla poco despueacutes de la toma de Granada por los Reyes Catoacutelicos y que despueacutes pasariacutea al Peruacute Esta tradicioacuten ha perdurado en algunos pueblos de Espantildea hasta relativamente poco tiempo pueblos como Mojaacutecar (Almeriacutea) y Vejer de la Frontera (Caacutediz) son ejemplo de esta costumbre tambieacuten conocida como el de las laquocobijaacutesraquo

Tras la caiacuteda del reino musulmaacuten de Granada en 1492 la corona espa-ntildeola prohibioacute a las mujeres aacuterabes de Andaluciacutea vestir los velos islaacutemi-cos que cubriacutean sus rostros y ocultaban su identidad No era faacutecil des-arraigar esta costumbre tan ancestral y secular y el emperador Carlos asiacute como su hijo el rey Felipe II tuvieron que repetir la prohibicioacuten Cuando finalmente las moras fueron obligadas a abandonar sus velos y a adoptar el chal castellano comenzaron a utilizar la nueva prenda para cubrir sus rostros dejando al descubierto soacutelo uno de los ojos Esta nueva moda en el uso del chal tradicional nos asegura leoacuten Pi-nelo era extremadamente graciosa sensual y atractiva a causa de la belleza exoacutetica de los ojos de las moras Las mujeres cristianas de Granada Coacuterdoba y Sevilla imitaron pronto la nueva moda de llevar el chal y asiacute nacioacute la laquotapadaraquo hispana Desde Sevilla la nueva moda

150 JUAN FRANCISCO MAURA

fue a las colonias de ultramar y tomoacute raices especialmente en el Peruacute (Martiacuten 317-18)

En un reciente estudio sobre la educacioacuten de la mujer en la Ameacuterica virreinal apare-cen algunos ejemplos significativos de mujeres espantildeolas que consagraron gran parte de sus vidas a la tarea docente Dentro del proceso educativo de las espantildeolas que fueron a las Indias destaca el papel de dontildea Catalina de Bustamante Joseacute de Jesuacutes Vega y Ma-riacutea Luisa Caacuterdenas de Vega dicen en su obra Ameacuterica Virreinal La Educacioacuten de la mujer que esta mujer pocos antildeos despueacutes del descubrimiento del Nuevo Mundo se dedicoacute a trabajar en favor de los indios aunque por desgracia su nombre y sus hechos en la labor docente hayan sido ignorados por los historiadores modernos (Vega 12-13)

Son varias las veces que se nombra a Catalina de Bustamante en el citado estudio y varias las fuentes antiguas en que se recoge la presencia de tan distinguida laquomatrona muy honrada y de buen ejemploraquo de la que ya hablaba Zumaacuterraga y sobre la que se hizo un informe enviado a Carlos V describiendo sus actividades en la Nueva Espantildea firmado por cuatro de los misioneros maacutes conocidos de Meacutexico

El informe dice que los franciscanos de Texcoco acababan de cons-truir un nuevo monasterio y cedido el antiguo A una honrada y honesta y muy virtuosa matrona que se dice Catalina de Bustamante para que ende instruyese a las hijas de los sentildeores de la comarcala cual con el favor de Dios y limosnas que don Hernando [Corteacutes] les haciacutea para su sustentacioacuten [teniacutea en esa casa-hogar] hasta trescientas mujeres antes maacutes que menos (Vega 14)

Estas laquocasas-hogarraquo no estaban regentadas necesariamente por monjas sino por lo que llamaban laquobeatasraquo mujeres que sin estar estar sujetas a la autoridad eclesiaacutestica se dedicaban a un laquolucro honestoraquo Llamadas tambieacuten laquobeateriosraquo eran diferentes a los conventos de monjas y constituiacutean las primeras escuelas de la mujer en la Nueva Espa-ntildea (Vega 20-21) Fue gracias al ejemplo de mujeres como Catalina de Bustamante que dedicaron sus vidas a la educacioacuten de los indiacutegenas que existiesen otras continuando su ejemplo Motoliniacutea dice claramente que laquode ese primer encerramiento (el de Texcoco regentado por Catalina) salieron otras honestas y muy virtuosas duentildeas que ensentildeaban a las maacutes menudasraquo (Vega 23)

Pero dontildea Catalina de Bustamante pese a ser una singular mujer y la iniciadora de la educacioacuten de la mujer en Meacutexico no fue un caso aislado corresponde maacutes bien a un patroacuten al que se ajustaron muchas de las pioneras de la Nueva Espantildea que sembraron instituciones de educacioacuten de la mujer En 1530 unos antildeos maacutes tarde aparecioacute una de las grandes protectoras de la instruccioacuten femenina en Ameacuterica La emperatriz Isabel de Portugal (Vega 24)

Desde comienzos de la conquista fueron varios los centros docentes regentados por mujeres en los que la ensentildeanza no estaba impartida por monjas Una de las institucio-nes maacutes sobresalientes del sistema educativo fue el Colegio de Nintildeas que se establecioacute en la ciudad de Meacutexico a principios del siglo XVI con maestras que no eran monjas Estas seglares conocidas comunmente como laquomigasraquo eran las descendientes de las antiguas beatas Su ubicacioacuten permanente fue determinada en 1548 lugar que serviriacutea de escue-la ininterrumpidamente hasta 1862 cuando el edificio fue convertido en bodega (Vega 60) No se debe perder de vista que no soacutelo por el hecho de llevar una vida secular se

151ESPANtildeOLAS DE ULTRAMAR EN LA HISTORIA Y EN LA LITERATURA

gozaba de maacutes privilegios Era maacutes bien al contrario En las carreteras las mujeres segla-res no inspiraban el mismo respeto que las monjas que ademaacutes teniacutean contacto cons-tante con personas de los dos sexos no pertenecientes a la Iglesia (Arenal 297) Ademaacutes dentro de las murallas del convento desapareciacutean muchas de las barreras sociales que limitaban a la mujer de esta eacutepoca

La presencia femenina y la monarquiacutea

Pues iquestcoacutemo sabes tuacute preguntoacute don Quijote que los grandes llevan detraacutes de siacute a sus caballerizos Yo seacute lo direacute respondioacute Sancho Los antildeos pasados es-tuve un mes en la corte y alliacute vi que paseaacutendose un se-ntildeor muy pequentildeo que deciacutean que era muy grande un hombre le seguiacutea a caballo a todas las vueltas que daba que no pareciacutea que era su rabo Pregunteacute que coacutemo aquel hombre no se juntaba con el otro sino que siempre anda-ba tras deacutel Respondieacuterome que era su caballerizo y que era uso de grandes llevar tras siacute a los tales Desde enton-ces lo seacute tan bien que nunca se me ha olvidado (Cervan-tes Don Quijote)

Los monarcas espantildeoles fueron conscientes de que sin la presencia femenina difiacute-cilmente se podriacutea solidificar una conquista a todos los niveles La mayor parte de los virreyes y altos cargos trajeron a sus mujeres con ellos y en las ciudades principales de Hispano-Ameacuterica como la ciudad de Meacutexico Guatemala Lima o Potosiacute habiacutea mujeres que disfrutaban de una esmerada educacioacuten (gramaacutetica latiacuten poesiacutea historia muacutesica) Esto dariacutea origen a una elegante y hasta cierto punto sofisticada sociedad en la que las mujeres tomaron parte en asuntos maacutes importantes que los que sus homoacutelogas toma-ran en las colonias portuguesas laquoThere were brilliant vice-regal courts at Mexico City and Lima far exceeding anything that could be found in Portuguese or English America during the seventeenth centuryraquo (Boxer 39) Las estadiacutesticas con las que contamos hoy no soacutelo demuestran que las mujeres llegaron al Nuevo Mundo en respetables porcen-tajes sino que ademaacutes tuvieron una participacioacuten activa llegando a intervenir en algu-nos casos en las liacuteneas de vanguardia Resulta difiacutecil aproximarse al estado de aacutenimo de aquellas mujeres que vivieron en eacutepocas tan lejanas Para ello es necesario indagar en los documentos de la eacutepoca para lograr rescatar del pasado todos esos tesoros de la historia muchas veces tergiversados y manipulados con el fin de que sirvan a propoacutesi-tos actuales Es en los viejos manuscritos donde queda testimoniada su presencia tan rica en dolores tragedias y por queacute no en amores Fue la llegada de estas mujeres una brisa de esperanza y de ilusioacuten para aquellos que ya estaban en las tierras de ultramar y

152 JUAN FRANCISCO MAURA

veiacutean venir de su propia tierra aquello que maacutes antildeoraban amantes madres hermanas Un haacutelito de vida y poesiacutea que suavizaba las costumbres de estos rudos y romaacutenticos pioneros laquoporque para ser hombres de tales empresas algo de romaacutentico debioacute de existir en ellos y que es tan propio del espantildeol y abandonariacutean en brazos tan gentiles sus bruscos modales que habiacutean adquirido en aacutespero contacto en selvas y montantildeasraquo (Villafantildee 125)

Hoy sabemos que en la normativa oficial de la Espantildea del siglo XVI y XVII se favoreciacutea el paso de mujeres al Nuevo Mundo Afirmar lo contrario no solamente es falso sino que implica un desconocimiento total de los primeros dos siglos de la colonizacioacuten espantildeola La presencia de estas mujeres espantildeolas fue efectiva laquolas disposiciones al respecto demuestran claramente que se teniacutea especial intereacutes en su arraigo y que se tra-taba de defender su posicioacuten de mujeres casadas con conquistadores y colonizadoresraquo (Villafantildee 126) Los monarcas comprendiacutean que era praacutecticamente imposible que los hombres viviesen sin mujeres y que de ser asiacute era de esperar que se cometiesen abusos con las indias lo que incidiriacutea en la moral social y en el buen gobierno de la colonia Ademaacutes sin un asentamiento definitivo con hogares y familias difiacutecilmente se podriacutea llevar a cabo una presencia permanente en las nuevas colonias (Orsquo Sullivan-Beare 45)

Empezando por los Reyes Catoacutelicos la preocupacioacuten de que en las colonias se esta-bleciesen nuacutecleos que tuviesen como base la familia cristiana fue clara Las capitulacio-nes que a este efecto se hicieron entre los conquistadores y la Corona fueron nume-rosas La efectuada entre Rodrigo de Baacutestidas y Carlos V puede ser un buen ejemplo Fechada en Valladolid el 6 de noviembre de 1524 muestra el propoacutesito de Baacutestidas de establecer una colonia permanente en la desembocadura del riacuteo Magdalena en el terri-torio que hoy vendriacutea a corresponder a Colombia El documento firmado por el Empe-rador comienza asiacute

El Rey Por cuanto por parte de vos Rodrigo de Baacutestidas vecino de la ciudad de Santo Domingo de la Isla Espantildeola Me fueacute fecha relacioacuten que por servicio de la Catholica Reyna Mi Sentildeora e Nuestro os ofre-ceacuteis de poblar e poblariades la provincia e puerto de Santa Marta que en Castilla de Oro llamada la Tierra Firme e que la poblariades dentro de dos antildeos siguientes haciendo en ella un pueblo en que no menos haya en eacutel al presente cincuenta vezinos que los quince de ellos sean casados y tengan consigo a sus mujeres y que lo teniades fecho dentro de dos antildeos y de hoy en adelante lo maacutes que fuese posible asiacute de cris-tianos espantildeoles como de indios (Restrepo 1 30)

De igual manera el priacutencipe Felipe (futuro Felipe II) en las capitulaciones establecidas en 1547 con Juan de Sanabria para que eacuteste fuese como gobernador y capitaacuten general de la dicha provincia escribe lo siguiente laquoPrimeramente que seais obligado e os obligeis a llevar destos Reynos de Castilla a la dicha provincia del Rio de la Plata cien casados con sus mujeres e hijos para poblar la dicha provincia y con ellos llevareis a vuestra muger e hijos (CDI de Ameacuterica y Oceaniacutea 23 119)

En numerosas ocasiones se pone de manifiesto el apoyo de la monarquiacutea a la emigra-cioacuten femenina tantas que difiacutecilmente se podriacutean enumerar todos los casos Lo cierto es que la legislatura vigente favoreciacutea la emigracioacuten y traslado de mujeres con toda una se-

153ESPANtildeOLAS DE ULTRAMAR EN LA HISTORIA Y EN LA LITERATURA

rie de alicientes137 sobre todo si eacutestas estaban casadas pasaje para llevar a las familias franquicia de derecho para los artiacuteculos que portasen consigo favoritismo en cargos destinos y contrataciones a aquellos que pasasen con sus mujeres incluyendo ademaacutes de los castellanos y leoneses a suacutebditos de otras partes de la corona incluso genoveses y portugueses si estos veniacutean acompantildeados de sus consortes (Fernaacutendez Duro 15-16)

Incluso se llegoacute a imponer penas a aquellos hombres casados que no llevasen a sus mujeres con ellos a Indias en el teacutermino de un antildeo El mismo emperador en una ceacutedula otorgada al virrey de la Nueva Espantildea le recomendaba que laquoprocurase persuadir a ca-sarse a los solteros que estuviesen en edad y situacioacuten de hacerloraquo prometieacutendoles que al efectuar el matrimonio seriacutean preferidos en el reparto de indios En la isla de San Juan de Puerto Rico los cargos oficiales y oficios puacuteblicos debiacutean de ser desempentildeados por los casados en primer lugar En Meacutexico ocurrioacute lo mismo con los cargos de corregido-res (Konetzke laquoemigracioacutenraquo 140-41) Felipe II al igual que sus antecesores y sucesores reiteraraacute y justificaraacute los beneficios de los que seraacuten acreedores aquellos que tengan allaacute a sus mujeres laquoque los que han servido en los descubrimientos de las dichas Indias y tambieacuten los que ayudan a la poblacioacuten dellas que tienen allaacute sus mugeres sean preferi-dos en los aprouechamientos qualesquierraquo mandando que despueacutes de los conquistado-res se tuviera en cuenta para la laquoprovisioacuten de los corregimientosraquo a los colonos casados siempre que estuvieran capacitados para dichos cargos (Konetzke laquoemigracioacutenraquo 141)

Las disposiciones en favor del matrimonio son claras ya sea por medio de un favo-ritismo manifiesto como en los casos antes citados o mediante medidas de cohercioacuten para que esta poliacutetica se llevase a cabo Don Sebastiaacuten Ramiacuterez de Fuenleal obispo de Santo Domingo y presidente de la Audiencia de Meacutexico propuso que a aquellos enco-menderos que no estuviesen casados y que no hubiesen tomado parte en la conquista se les quitase los indios concedidos con la obligacioacuten de devolveacuterselos si en el plazo de un antildeo habiacutean contraiacutedo matrimonio (Konetzke laquoemigracioacutenraquo 142-43) Por supuesto hubo excepciones a estas reglas En algunos casos ni la mujer teniacutea especial intereacutes en vivir junto con su marido en las Ameacutericas ni el marido queriacutea ir a buscar a su mujer pasado el plazo de un antildeo En el presente documento y de forma excepcional las auto-ridades reales protegen a los conyuges para que puedan seguir viviendo separados en continentes diferentes

Nuestras justicias de la ysla de Cubagua e otras qualesquier de las nuestras Yndias yslas e tierra firme del mar oceacuteano e a cada uno e qualquier de vos a quieacuten esta mi ceacutedula fuese mostrada por parte de Alonso de Tapia nuestro veedor de la provincia de Paria me ha sido hecha relacioacuten que ha mucho tiempo que reside en esas partes donde nos ha servido en lo que se ha ofrecido e que agora vos otros le apre-miaacuteis a que venga o embiacutee a estos Reinos por su muger lo cual no puede al presente hazer a causa de no ter posibilidad para ello a mi me ha suplicado vos mandase que no le compeliacuteesedes ny apremiaacutesedes a que viniese o enviase por la dicha su muger y dieacutesedes por libres los fiadores que tenyades para que dentro de un antildeo embiariacutea o verniacutea por

137 Reales Ceacutedulas de los antildeos 1502 y 1503 Academia de la Historia Coleccioacuten Muntildeoz tomo 75 fols 209 y 220 citado por Fernaacutendez Duro 15

154 JUAN FRANCISCO MAURA

ella o como la mi merced fuese lo cual visto por los de nuestro consejo juntamente con una peticioacuten presentada por dontildea Mariacutea Gudiel muger del dicho Alonso de Tapia por la cual nos suplica lo mismo que acor-dado que debiacutea mandar esta mi ceacutedula para vos por la qual vos mando que no compelaacuteis ni apremieacuteis al dicho Alonso de Tapia a que venga ni enviacutee a estos reinos por la dicha su muger si no fuere a que la pro-vea de lo que fuere necesario para su mantenimiento y deys por libres quales quier fianzas que sobre ello haya dado e no fagades ende al por alguna manera Firmado en la villa de Valladolid a VII diacuteas del mes de febrero de mil e quinientos e treinta y siete antildeos yo el licenciado Con-de de Samano y sentildealada del cardenal Beltraacuten y Carbajal [Aparte en letra pequentildea] Este diacutea se despachoacute una provisioacuten por la cuaacutel su Mag hizo merced a Alonso de Tapia de la veedoriacutea de la provincia de Paria por muerte de Garciacutea de Aguilar con las clausulas ordinarias y con el mismo salario que teniacutea Aguilar Firmado del emperador y de Beltraacuten y Bernal y Velaacutezquez El Rey (Registro de disposiciones Riacuteo Marantildeoacuten AGI Indiferente General Legajo 416 libro 2 Fols 94v y 95r)

El punto maacutes interesante a destacar de todas estas disposiciones oficiales en cuanto a la emigracioacuten femenina al Nuevo Mundo no es otro que la libertad que se da a la mujer de decidir si quiere o no casada o sin casar trasladarse al nuevo continente no como una imposicioacuten sino como un precepto laquoel espiacuteritu de las disposiciones en el sentido de asegurar la vida marital de los casados significa que la mujer que su marido invita a pa-sar a las Indias puede negarseraquo (Villafantildee 127) Habriacutea que ver las opciones laquorealesraquo ade-maacutes de las legales y econoacutemicas que le quedaban a la mujer si tomaba esta decisioacuten

El saber la libertad de eleccioacuten que estas mujeres teniacutean de antemano antes de aden-trarse en las interminables penalidades y aventuras que los viajes de la navegacioacuten tran-soceaacutenica suponiacutean hace que sus hechos y esfuerzos cobren auacuten maacutes relieve En nume-rosas ocasiones estas mujeres cruzaron el oceacuteano una y maacutes veces sin otro motivo que el de defender los derechos e intereses de los suyos Lo que resulta maacutes valioso de todo esto es que lo hicieran por propia iniciativa arriesgando sus vidas para que se hiciese justicia y para que no les faltase lo necesario a aquellos que estaban en la otra orilla Las autoridades vigentes conocedoras de los vaciacuteos legales existentes en las nuevas colo-nias se apresuraron a poner en vigor aquellas normas que redundaran en el beneficio de los menos favorecidos por las circunstancias La institucioacuten del matrimonio cuya trans-cendencia es fundamental en la vida juriacutedica y social de la mujer tuvo que ser legislada en Ameacuterica con una serie de nuevas disposiciones agregados modificaciones y aclara-ciones Asiacute pues la legislacioacuten de base espantildeola tuvo que sufrir en tierras americanas esta serie de cambios por motivos poliacuteticos y sociales (Villafantildee 126)

Para hacer un sumario de lo dispuesto hasta el siglo XVI en cuanto a la legislacioacuten de las mujeres que teniacutean familia o intereses en Indias merece la pena mencionar que existieron una serie de disposiciones que protegiacutean a las mujeres para que eacutestas no se viesen abandonadas por sus maridos En un epiacutegrafe de la Recopilacioacuten de 1680 (libro VII tiacutetulo 3) se deja ver claramente la preocupacioacuten de las autoridades en este asunto laquoDe los casados en Espantildea e Indias que estaacuten ausentes de sus mujeres y esposasraquo (Vi-llafantildee 126-27)

155ESPANtildeOLAS DE ULTRAMAR EN LA HISTORIA Y EN LA LITERATURA

La lista de disposiciones se hace interminable En los reinados de Fernando el Catoacute-lico Carlos V Felipe II Felipe III o incluso Carlos II la insistencia es constante La ra-zoacuten de esta insistencia seriacutea bastante obvia dado que con un oceacuteano por medio seriacutean muchos los que se aprovechasen de llevar una doble vida marital sin el estricto control y vigilancia de sus mujeres que se encontraban en la peniacutensula La ley XXVII libro IX tiacutetulo XXVI determina laquoDeclaramos por personas prohibidas para embarcarse y pasar a las Indias todos los casados y desposados en estos reinos lsquosino llevaren con ellos sus mujeresrsquo aunque sean virreyes oidores gobernadores o nos fuesen a servir en cual-quier cargo y oficios de Guerra Justicia y Hacienda porque es nuestra voluntad que todos los susodichos lleven a sus mujeresraquo (Villafantildee 127) laquoLos eclesiaacutesticos eran los en-cargados de dar cuenta a los tribunales competentes de aquellos que estando casados permaneciacutean en Indias sin sus mujeres Son reiteradas las disposiciones de Fernando el Catoacutelico en este sentidoraquo138 En 1514 el rey don Fernando ordena en una provisioacuten para la isla Espantildeola laquodoy licencia eacute facultad aacute cualquier persona naturales de estos Reynos para libremente se puedan casar con mujeres naturales de esa dicha ysla sin tener que incurrir por ello en pena algunaraquo (Villafantildee 129)

No se debe olvidar tampoco a aquellas mujeres que decidieron pasar a las laquonuevas tierrasraquo solteras Estas mujeres tambieacuten tuvieron un papel importante en el desarrollo de las nuevas colonias Los organismos espantildeoles del momento como los mandatarios indianos y todos los cronistas no dejaron pasar desapercibida la importancia social de estas mujeres en la poliacutetica de poblamiento laquo[E]s cierto que los pueblos de Indias nuevamente poblados no se tienen por fijos o estables ni permanentes hasta tanto que mujeres espantildeolas entren en ellos y los encomenderos y conquistadores se casen por muchas causas y respetos buenos y saludables que para ello hayraquo (Villafantildee 126-27)

Si la intencioacuten era la de una presencia permanente en las tierras americanas la mujer soltera que pasase a ellas siempre seriacutea un motivo maacutes para el colono o conquistador de continuar en el mismo suelo Se podriacutea empezar una familia si asiacute se quisiese sin tener que pensar en volver a la metroacutepoli ya fuese a disfrutar de los bienes adquiridos o a laquobuscarraquo una esposa El problema aparecioacute cuando se produjo un exceso de mujeres solteras lo que de alguna manera alteroacute la estructura social existente ya que no habiacutea muchas opciones para ellas aparte del matrimonio o el convento

En consideracioacuten a que la experiencia habiacutea demostrado que un exce-sivo nuacutemero de mujeres ejerciacutea perniciosa influencia sobre la moral y las costumbres se suplicaba al rey no otorgase a aquellas tantas auto-rizaciones para emigrar al Peruacute La ciudad de la Plata fundada en 1538 emite en 1577 un informe en el que se expone la urgente necesidad de que se funde un convento de monjas pues en el territorio de las Au-diencias de Los Charcas existiacutea un gran nuacutemero de muchachas que no pudieacutendose casar se hallaban en gran peligro de perderse (Konetzke laquoemigracioacutenraquo 149)

138 Solorzano Pereira Juan de Libro Primero de la Recopilacioacuten de las Ceacutedulas Reales Cartas y Provisiones y Or-denanzas Reales Noticia preliminar de Ricardo Levenne Universidad de Buenos Aires Facultad de Derecho Y Ciencias Sociales Pub del Instituto de Historia del Derecho Argentino Coleccioacuten de Textos y Documentos para la Historia del Derecho Argentino t V Buenos Aires Imp de la Universidad de Buenos Aires 1945 (Li-bro I Ley 10 laquoQue los Espantildeoles puedan casar con Indias y al contrario a su voluntadraquo t2 p 138 citado en Villafantildee 129

156 JUAN FRANCISCO MAURA

Entristece ver coacutemo se manejan las cifras de estas mujeres como si de ganado o de bienes suntuarios se tratase Por otra parte existieron irregularidades como la de pobla-doras espantildeolas que vivieron amancebadas con hombres que ya estaban casados en la peniacutensula Normalmente esto ocurriacutea cuando la estancia del conquistador se prolonga-ba maacutes de lo debido en lugares donde habiacutea pocas espantildeolas Muchas veces nacieron hijos de estas uniones que hicieron auacuten maacutes difiacutecil la situacioacuten para las mujeres que esperaban en Espantildea a un marido que ya no teniacutea ningunas intenciones de volver En los juicios de residencia los documentos acostumbran a citar estos casos ya que era parte de su obligacioacuten castigar las irregularidades extramatrimoniales y salvaguardar las buenas costumbres familiares que con tanto intereacutes se deseaba mantener laquoUn ejemplo nos lo da la isla de Cuba donde en 1532 viven con hombres casados Olalla Hernaacuten-dez Santillana Aranda lsquola Cordobesarsquo Catalina de Leoacuten Catalina Saacutenchez Francisca Hernaacutendez Mayor de Azebedo Juana de Valeros y lsquouna mujer que estaba en casa de Ayalarsquoraquo (Borges 416)

Estos casos no fueron aislados y mucho menos en Cuba centro neuraacutelgico de todo el movimiento de ida y vuelta entre la metroacutepoli y el Nuevo Mundo Estas ocho acusa-ciones por lo tanto no tienen porqueacute considerarse extraordinarias y menos en el lugar maacutes cosmopolita de las Indias en esos momentos al que llegaban flotas a cada momen-to Al parecer existieron casos parecidos en el Riacuteo de la Plata Peruacute y Nueva Espantildea (Ratcliffe 347) El margen legal para que estas mujeres viviesen como quisiesen estuvo limitado por una moral que veiacutea uacutenicamente en el matrimonio o el convento una salida laquovaacutelidaraquo para que fueran aceptadas socialmente Los hombres en iguales circunstan-cias fueron juzgados por una laquomoralraquo mucho maacutes permisiva

La mujer y el cuerpo eclesiaacutestico

Pues iquestquieacuten diablos os traiacutedo aquiacute dijo don Quijote siendo hombre de la iglesia iquestQuieacuten sentildeor replicoacute el caiacutedo laquomi desventuraraquo Pues otra mayor os amenaza dijo don Quijote sino me satisfaceacuteis a todo cuanto primero os pregunteacute (Cervantes Don Quijote )

Otro factor a tener en cuenta en un anaacutelisis sobre la presencia de la mujer en el Nuevo Mundo es el que tiene que ver con la institucioacuten maacutes importante de las que llegaron desde Europa la iglesia catoacutelica Sin aacutenimo de criticar a tan compleja institucioacuten res-ponsable de gran parte de los aconteceres en el Nuevo Mundo vale la pena analizar algunas singularidades Muchos de sus miembros fueron grandes ejemplos de valor e inteligencia a la hora de tratar los maacutes variados y escabrosos asuntos con los que se encontraron los cristianos en la otra orilla durante este periacuteodo Se debe resaltar tam-

157ESPANtildeOLAS DE ULTRAMAR EN LA HISTORIA Y EN LA LITERATURA

bieacuten su caraacutecter medieval en la manera de hacer apostolado y de entender y tratar a los potenciales cristianos Si se tienen en cuenta los privilegios y prerrogativas que algunas de las altas jerarquiacuteas eclesiaacutesticas tuvieron no seriacutea superfluo estimar que un respeta-ble porcentaje de la poblacioacuten de origen laquodudosoraquo muy bien podiacutea venir de la misma iglesia Fueron muchas las viacutectimas y muchas las familias divididas por un padre laquoinvi-sibleraquo Gran parte de los hijos o laquosobrinosraquo de estos sacerdotes pasaron a ocupar cargos similares incluyendo los privilegios que estos cargos llevaban consigo como si se trata-se de cualquier otro oficio gremial transmitido generacionalmente regla tan comuacuten en la Europa medieval Todaviacutea a finales del siglo XIII en Espantildea los derechos de los hijos y nietos de los sacerdotes estaban protegidos por la ley sin que hubiesen podido ser erradicados por las reformas gregorianas (Ratcliffe 347)139

Las letras espantildeolas ya se haciacutean eco de estos lances amorosos entre representantes de la Iglesia y ciertas damas del lugar desde los tiempos del poeta riojano Gonzalo de Berceo En su obra maacutes conocida Los milagros de Nuestra Sentildeora Berceo describe con un realismo ingenuo y sencillo relatos de humor y de humanismo sobre aquellos hombres de carne y hueso que eran perdonados por la intercesioacuten de la Virgen Mariacutea Juan Ruiz por su lado haraacute de su Libro de buen amor la obra maacutes representativa en este sentido Seriacutea prolijo recordar la actuacioacuten de la Iglesia durante diversos periacuteodos de la Edad Media no soacutelo en Espantildea sino en toda Europa En la Espantildea musulmana del siglo XII concretamente en Sevilla el comportamiento de los representantes de la iglesia cristia-na (mozaacuterabe) en territorio islaacutemico es duramente criticado por el sevillano Ibn Abdun Este precioso documento muestra el estricto control y falta de confianza que existiacutea sobre la mujer prohibieacutendolas que entrasen en las laquoabominablesraquo iglesias cristianas

porque los cleacuterigos [cristianos] son libertinos fornicadores y sodomi-tas Asimismo debe prohibirse a las mujeres francas que entren en la iglesia maacutes que en diacuteas de funcioacuten o fiesta porque alliacute comen beben y fornican con los cleacuterigos y no hay uno de ellos que no tenga dos o maacutes de estas mujeres con que acostarse Han tomado esta costumbre por haber declarado iliacutecito lo liacutecito y viceversa Convendriacutea pues mandar a los cleacuterigos que se casasen como ocurre en Oriente y que si quie-ren lo hagan (Leacutevi-Provenccedilal 150)

Pese a existir una convivencia paciacutefica durante gran parte de la Edad Media entre los tres credos monoteiacutestas de Espantildea (cristianos musulmanes y judiacuteos) esto no suponiacutea que no existiese desprecio y desconfianza entre estos grupos religiosos Dice Abdun resaltando el peligro que suponiacutea que una mujer entrase en casa de un cleacuterigo cristiano de vida ceacutelibe

No debe tolerarse que haya mujer sea vieja o no en casa de un cleacuterigo mientras eacuteste rehuacutese casarse Obliacutegueseles ademaacutes a circuncidarse co-mo les obligoacute al-Mutadid pues si a lo que dicen siguen el ejemplo de Jesuacutes (iexclDios les bendiga y salve) Jesuacutes se circuncidoacute y precisamente ellos que han abandonado esta praacutectica tienen una fiesta que celebran solemnemente el diacutea de su circuncisioacuten (Leacutevi-Provenccedilal 150-151)

139 Valdriacutea la pena ver si han cambiado mucho las cosas desde hace quinientos antildeos a esta parte o si in-cluso la iglesia moderna ha retrocedido en tolerancia en cuanto a las relaciones sexuales de los representantes de la Iglesia

158 JUAN FRANCISCO MAURA

El historiador argentino Germaacuten Arciniegas recoge un pasaje ilustrativo de lo men-cionado anteriormente pero trasladado al ambiente de la colonia diciendo que incluso en poblaciones pequentildeas como Santa Fe con poco maacutes de un convento y una ermita la fragilidad de la carne enredaba a frailes soldados y virreyes por igual laquoEl buen So-liacutes que murioacute en olor de santidad con la cabeza reclinada sobre un par de ladrillos y en saya de franciscano cruzaba en las noches el solar de su palacio para ir a besar a la Marichuelaraquo (118-19)

Arciniegas recoge tambieacuten un suceso aparecido en el diario de Lima en 1667 que no tuvo que ser extraordinario durante los primeros antildeos de la colonia laquoEl fraile carmelita mdashGrande hereje y siendo sacerdote deciacutea misa gran perro lujurioso deshonesto que relatando sus maldades dijo que en cierta ciudad habiacutea conocido carnalmente a maacutes de trescientas y sesenta mujeres y en un convento de monjas habiacutea cometido muchos sacrilegios Este lo trujeron preso de Buenos Aires por Chileraquo (119)

Las controversias de la iglesia moderna sobre las relaciones que los eclesiaacutesticos de-ben tener con el sexo femenino parece que no han encontrado todaviacutea respuesta Sigue existiendo miedo y recelo a que la mujer comparta no soacutelo poder en la jerarquiacutea de la iglesiacutea sino en la vida privada de los miembros de la institucioacuten En la Nueva Espantildea el primer obispo de Meacutexico Juan de Zumaacuterraga viendo en la mujer un ser de tentacioacuten irresistible prohibioacute terminantemente la presencia de eacutestas en su casa Ni siquiera para su limpieza y aseo El franciscano Juan de Torquemada se refiere a este comportamien-to como una de las virtudes del popular obispo

Fue este benditiacutesimo prelado muy amigo de la virtud y de virtuosos y aceacuterrimo reprehendedor de vicios y viciosos y tan enemigo de la ociosidad que no permitiriacutea que alguno de su casa estuviese ocioso fue amiciacutesimo de la limpieza por lo cual jamaacutes consintioacute que mujer alguna entrase en su casa aunque fuese necesaria al servicio de ella ni nunca consintioacute que por alguna ocasioacuten subiese mujer a lo alto y aposentos de ella antes lo teniacutea todo cerrado como un monasterio porque sabiacutea (como quien tambieacuten sabiacutea) que la ocasioacuten suele derribar los maacutes fuertes y robustos corazones (450 lib 20 cap 31)

No fueron uacutenicamente miembros de la iglesia catoacutelica los que valoraron la lucha con-tra la tentacioacuten siguiendo al pie de la letra el crudeliacutesimo refraacuten laquoentre santa y santo pared de cal y cantoraquo Se tienen algunas noticias de la vida social de los primeros tiem-pos de la colonia En estos documentos se puede observar coacutemo no distaban mucho las oacuterdenes que se dictaban en la metroacutepoli y las que se llevaban a cabo en la Nueva Espantildea La vida social tanto de damas como de algunos miembros de la iglesia de las colonias era maacutes laquorelajadaraquo de lo que las normas permitiacutean Gracias a la informacioacuten ofrecida por Manuel Romero de Terreros disponemos de los nombres de las primeras virreinas

Las esposas de los primeros cinco Virreyes Don Antonio de Mendoza Don Luis de Velasco Don Gastoacuten de Peralta Don Martiacuten Enriacutequez de Almanza y Don Lorenzo Suaacuterez de Mendoza Conde de la Coruntildea fueron respectivamente Dontildea Caterina de Vargas Dontildea Ana de Cas-tilla y Mendoza hija de Don Diego de Castilla Sentildeor de Gor y Caba-

159ESPANtildeOLAS DE ULTRAMAR EN LA HISTORIA Y EN LA LITERATURA

llerizo de Carlos V Dontildea Leonor de Vieo Dontildea Mariacutea Manrique hija del Marqueacutes de Aguilar y Dontildea Catalina de la Cerda hija del segundo Duque de Medinaceli (Romero 2)

Existen noticias concretas de la seacuteptima virreina de la Nueva Espantildea (1586) dontildea Blanca de Velasco marquesa de Villamanrique En ellas destaca lo anteriormente men-cionado sobre la falta de tolerancia existente en aquellos tiempos difiacutecilmente com-prensible si no fuera por fragmentos esporaacutedicos conservados sobre la vida colonial en la Nueva Espantildea En la siguiente Relacioacuten hecha por autores anoacutenimos sobre la visita que hizo Fray Alonso Ponce Comisario General de la Orden Seraacutefica a las provincias de la Nueva Espantildea se mencionan las eneacutergicas medidas que con los miembros de su orden en su opinioacuten de moral laquomuy relajadaraquo tomoacute este religioso Tambieacuten aparecen mencionadas sus relaciones con la Virreina

Captoacutese ademaacutes la enemistad del gobernante y de la Virreina Dontildea Blanca de Velasco hija del cuarto Conde de Nieva sentildeora seguacuten pare-ce de conducta ligera y caraacutecter maacutes que dominante laquoPor este mismo tiempo (septiembre de 1586) fueron el Virey y la Vireyna a holgarse y recrearse en la cibdad de Xochimilco Posoacute con toda su casa dentro de nuestro convento en un dormitorio deacutel y detuacutevose alliacute siete u ocho diacuteas en que los indios les hicieron grandes fiestas aunque les costaron caras porque en una dellas murieron dos o tres dellos con un tiro que se disparoacute y reventoacute y al principal indio de aquella cibdad hirieron muy malraquo (Romero 3-4)

A pesar del riacutegido control eclesiaacutestico y civil que habiacutea en la Nueva Espantildea existieron tambieacuten pareacutentesis en los que incluso miembros de la iglesia y mujeres mdashhumanos al fin y al cabomdash pudieron disfrutar de algunos momentos de regocijo y alegriacutea Con-tinuando con la cita anterior el mismo autor se queja del laquoexcesoraquo de libertad en los frailes que se suponiacutea que teniacutean que profesar una extremada pobreza y no digamos castidad En primer lugar se describen pormenorizadamente la abundancia en el tipo y cantidad de comida de toda clase dulces y vino que se consumieron con largueza y generosidad durante aquellas fiestas Pero lo que maacutes indigna al autor (o autores) fue que llegasen a entrar mujeres en el convento

y aunque todo esto es malo delante de Dios y delante de los hom-bres lo que maacutes mal parecioacute y de que todo el mundo tuvo que mur-murar fueacute la demasiada libertad rotura y disolucioacuten que hubo en en-trar y estar muy de propoacutesito mujeres no soacutelo la Vireyna y las suyas sino otras muchas dentro del dicho convento y andar por las celdas como si fuese cosa profana y como si no hubiera breve apostoacutelico que soacute graves penas y censuras prohibe estas entradas y como si a los frai-les no los comprendiera el dicho breve por admitirlas y no estuviera asiacute declarado y mandado por nuestros estatutos generales de Toledo (Romero 4-5)

La preocupacioacuten por las laquotentaciones de la carneraquo fuera del matrimonio siempre es-tuvo en la mente de los religiosos espantildeoles asiacute como de otras nacionalidades y reli-

160 JUAN FRANCISCO MAURA

giones que intentaban vanamente erradicar algo tan intriacutenseco al ser humano como a cualquier otra especie animal Esta preocupacioacuten se acentuoacute mucho maacutes en el Nuevo Mundo donde muchas sociedades tribales no veiacutean a la mujer como parte integrante de su propiedad privada La razoacuten es obviamente socioloacutegica y ha existido desde el principio de los tiempos en las civilizaciones maacutes primitivas laquoNo desearaacutes a la mujer del proacutejimoraquo El quebrantar este precepto equivaldriacutea a desestabilizar desde su base a la sociedad judeo-cristiana fundamentada en la familia Las penas aplicadas en estas transgresiones seraacuten lo suficientemente severas como para marginar socialmente mdashen el mejor de los casosmdash a aquellos que las pongan en praacutectica Siendo la mujer la encar-gada por la naturaleza de trasmitir la descendencia de la especie su libertad sexual se veraacute limitada por el peligro de quedar embarazada cada vez que ignore tal elemental precepto140

Primeras escritoras del Nuevo Mundo

Contra cuerdos y contra locos estaacute obligado cualquier caballero andante a volver por la honra de las mujeres cualesquiera que sean Cuanto maacutes por las reinas de tan alta guisa y pro como fue la reina Madaacutesima a quien yo tengo particular aficioacuten por sus buenas partes porque fuera de haber sido fermosa ademaacutes fue muy prudente y muy sufrida en sus calamidades que las tuvo muchas (Cervantes Don Quijote)

Fueron varias las escritoras que durante los siglos XVI y XVII tuvieron una relacioacuten di-recta o indirecta con el Nuevo Mundo Muchas de ellas eligieron la vida monaacutestica mdashen algunos casos como refugio huyendo de sus maridosmdash uacutenica salida en una estructura social en donde no eran muchas las opciones especialmente en una eacutepoca donde el fac-tor religioso pesaba casi tanto como el econoacutemico pero sobre todo para dedicarse a una vida espiritual difiacutecilmente alcanzable en otras circunstancias Mariloacute Vigil apunta que las monjas que lo eran por su propia voluntad ademaacutes de tener inquietudes religiosas tambieacuten las teniacutean intelectuales como es el caso de la escritora miacutestica espantildeola Santa Teresa de Jesuacutes (1515-1582) que ademaacutes de tener una de las vidas maacutes interesantes que se conozcan supo sacar tiempo para escribir las maacutes bellas manifestaciones de la poesiacutea liacuterica y sobre todo de la prosa castellana (Vigil 237-38) Cada una de estas mujeres de-dicadas a la vida literaria y espiritual de su tiempo se merece muchiacutesimo maacutes espacio del que se les pueda ofrecer en estas pocas liacuteneas No obstante con estas pasajeras men-

140 Aunque afortunadamente las cosas han cambiado para la mujer no se debe dejar de mencionar la can-tidad de abusos sexuales de la que es viacutectima en la sociedad moderna

161ESPANtildeOLAS DE ULTRAMAR EN LA HISTORIA Y EN LA LITERATURA

ciones se espera al menos incluirlas y poder despertar el suficiente intereacutes para que sus vidas y sus obras no sigan sumergidas en las simas del olvido Para que estas mujeres de la iglesia pudiesen satisfacer su curiosidad cognoscitiva era necesario romper todas aquellas barreras que supusiesen un estorbo o una restriccioacuten a la hora de investigar consultar o hablar con cualquier persona religiosa de cualquier orden o secular ya fue-se obispo o cleacuterigo Las posiciones intelectuales entre las diferentes oacuterdenes religiosas fueron muy dispares como bien es sabido No eran iguales los planteamientos teoloacute-gicos de los dominicos que los de los franciscanos o los de los carmelitas que los de los agustinos o jesuitas Era necesario por lo tanto tener acceso a estas fuentes de informa-cioacuten para poder constrastar las diferencias y hacer valoraciones propias (Vigil 237-38) El escritor espantildeol Caro Baroja destaca el caraacutecter enciclopeacutedico del catolicismo donde se han integrado corrientes y posturas muy dispares que a traveacutes del diaacutelogo daban cierto espacio al creyente con maacutes curiosidad intelectual para que este pudiese compa-rar y valorar las diferentes opciones que se le ofreciacutean (Vigil 237-38)

Varias de estas mujeres intelectuales fueron hijas de conquistadores que aunque na-cidas en suelo americano seguiacutean expresaacutendose en la lengua de sus padres con no me-nos fuerza que sus contemporaacuteneas peninsulares Es cierto que existieron numerosas escritoras en el Nuevo Mundo durante el siglo XVIII algunas dedicadas incluso al estudio de las matemaacuteticas como la mexicana Dontildea Francisca Gonzaga y Castillo Pero para limitar el presente trabajo a los siglos XVI y XVII uacutenicamente se incluiraacuten ejemplos de estos dos siglos

La peruana Josefa de Alarcoacuten publicoacute en 1648 unas liras dedicadas a las Exequias del Priacutencipe Baltasar Carlos

Cifro en capilla breveEl tribunal de la Magestad maacutes graveEn fe de lo que debeA Carlos que en dos mundos no cabe141

El caso de Sor Jeroacutenima de la Asuncioacuten es muy interesante una mujer que tuvo la oportunidad de viajar a Meacutexico y posteriormente a las Filipinas para cumplir con las mi-siones que le habiacutean sido encomendadas por su orden Nacida en Toledo en 1555 en el seno de una noble y acaudalada familia estuvo destinada a recorrer el mundo ofrecien-do sus servicios a todos los necesitados distinguieacutendose por su ardiente caridad laquovien-do que los galeotes eran tratados con dureza excesiva sobre todo cuando los llevaban de un pueblo a otro procuroacute aliviar las penas de aquellos desgraciados y lo consiguioacute en parteraquo (Serrano y Sanz 268 65) Hija del licenciado e ilustre jurista Pedro Garciacutea Yaacute-ntildeez y de dontildea Catalina de la Fuente ingresoacute contra su voluntad en el monasterio de las Clarisas de Santa Isabel de los Reyes (Toledo) el 5 de agosto de 1570 (Trevintildeo 46) hay que decir que eacutesta no seraacute la uacutenica voluntad contra la que tuvo que luchar

Sor Jeroacutenima se embarcoacute para Meacutexico y de alliacute partioacute hacia Manila junto con siete compantildeeras en el famoso laquoGaleoacuten de Manilaraquo que saliacutea anualmente del puerto mexi-cano de Acapulco Su viaje a las Filipinas duroacute un antildeo y tres meses desde su salida de Espantildea tiempo en el que demostroacute un gran valor y determinacioacuten por el soacutelo hecho de

141 Manuel Serrano y Sanz Apuntes para una biblioteca de escritoras espantildeolas desde el antildeo 1401 al 1833 vols 268 269 270 271 Biblioteca de Autores Espantildeoles (Madrid Atlas 1975) 268 19

162 JUAN FRANCISCO MAURA

embarcarse en tan precarias naves Fue la primera misionera de Oceaniacutea muriendo en Manila en 1621 Alliacute fundoacute el monasterio de Santa Clara que perviviriacutea hasta ser bom-bardeado en la Segunda Guerra Mundial (Trevintildeo 47) Escribioacute su Vida donde trata de la fundacioacuten del convento y de todas las tribulaciones mdashllegoacute a ser excomulgadamdash y satisfacciones que una vida dedicada a una causa justa proporciona Tambieacuten escribioacute una obra de caraacutecter filosoacutefico-teoloacutegico titulada Carta de marear en el mar del mundo nombre alegoacuterico que da cuenta de la enorme distancia recorrida a traveacutes del laquomar del espiacuterituraquo por sor Jeroacutenima He aquiacute algunos de sus versos de caraacutecter religioso

Vuestra soy para vos naciacuteiquestQueacute mandaacuteis hacer de miacute Inaccesible grandezaEterna Sabiduriacuteay bondad del alma miacuteaDios un ser poder y Altezamirad la suma pobrezade eacutesta que se ofrece aquiacuteiquestQueacute mandaacuteis hacer de miacute (Serrano y Sanz 268 66)

Ya en Meacutexico tenemos otro ejemplo de una mujer dedicada por completo a Dios y al estudio y composicioacuten de obras de caraacutecter teoloacutegico Dontildea Ana Mariacutea del Costa-do de Cristo nacida en la ciudad de Tlaxcala hacia el antildeo 1650 Tomoacute la orden de San Francisco para consagrarse a las labores de su orden y a la escritura Se dice que con los escritos de Dontildea Ana Mariacutea se podriacutean formar veinte tomos (Serrano y Sanz 268 282) Estas son algunas de sus obras Vida y muerte de Jesucristo Nuestro Sentildeor Vida del Seraacutefico Padre San Francisco de Asiacutes Vida de la iacutenclita Virgen Santa Clara Vida del sutiliacutesimo doctor Juan Duns Escoto

Pero no todas las monjas tuvieron vidas tan dedicadas al estudio y la oracioacuten Loacutegica-mente entre un nuacutemero tan grande de mujeres existioacute de todo y seriacutea un error pensar que todos los conventos femeninos estaban integrados por laquocaacutendidas palomasraquo Una monja en el siglo XVI y XVII teniacutea mucha maacutes fuerza que una mujer ordinaria ya que actuaban en grupo y la entrada a los recintos donde viviacutean estaba permitida solo a mu-jeres Esta situacioacuten las haciacutea mucho maacutes fuertes a todos los niveles que una mujer sola protegida uacutenicamente por su familia laquoLas monjas durante los siglos XVI y XVII lucharon por eludir la clausura y por zafarse del control que los frailes de las secciones masculi-nas de sus congregaciones ejerciacutean sobre ellasraquo (Vigil 230) Soacutelo un antildeo maacutes tarde que dontildea Ana Mariacutea del Costado de Cristo en 1651 y a 12 leguas de Meacutexico nacioacute la sin par Sor Juana Ineacutes de la Cruz hija de don Pedro Manuel de Asbaje natural de Vergara (Vizcaya) y de Dontildea Isabel Ramiacuterez de Santillana hija de espantildeoles (Serrano y Sanz 268 289) Por ser sin lugar a dudas la poeta maacutes importante de su tiempo y probable-mente la maacutes conocida del mundo hispano no profundizaremos en ella Su obra es un canto a la inteligencia y el exponente maacutes destacado de la literatura barroca americana tanto en prosa como en verso Destacareacute simplemente que Sor Juana Ineacutes pese a vivir en un sociedad donde no eran excesivas las libertades concedidas a las mujeres tuvo el caraacutecter y la determinacioacuten de dejarnos las maacutes bellas poesiacuteas amorosas que si bien estuvieron enmarcadas en un ambiente religioso como era de esperar por su condicioacuten

163ESPANtildeOLAS DE ULTRAMAR EN LA HISTORIA Y EN LA LITERATURA

pudieron transcender como unas de las maacutes bellas manifestaciones literarias que hoy en diacutea se conservan Fue su agudeza mental sensibilidad y cultura tal que no fueron suficientes los soacutelidos muros del convento para contener el genio de tan extraordinaria mujer Recordemos sus conocidiacutesimos versos en defensa de las mujeres

Hombres necios que acusaacuteisa la mujer sin razoacutensin ver que sois la ocasioacutende lo mismo que culpaacuteis142

Las metaacuteforas y la delicadeza que emplea en rebatir a su obispo en su laquoRespuesta a sor Filotea de la Cruzraquo no son solamente el epiacutetome del feminismo de su tiempo sino una de las maacutes brillantes manifestaciones del barroco hispano Poesiacutea teatro ensayo y un conocimiento extraordinario de las ciencias claacutesicas de su tiempo hacen de esta mujer un ejemplo extraordinario de las letras universales Ya son cientos los artiacuteculos y libros que se han escrito sobre Sor Juana y no dejan de aparecer tesis doctorales sobre los maacutes diversos temas conectados con la citada autora143 Como nos dice Stephanie Merrim en su documentada obra Early Modern Womenrsquos Writing and Sor Juana Ineacutes de la Cruz

She wrote and published on secular themes as atypical for a nun as human love Her remarkably extensive writings essayed and reenacted most of the (male) poetic dramatic theological and even philosophi-cal discourses of her times in the metropolis making her works a com-pendium of baroque culture in its diversity and syncretism Sor Juana self-creation as a learned women effectively toppled many of the walls in which she was materially enclosed and positioned her within the dynamic world of early modern European culture (xii)

No se debe dejar de mencionar a otras escritoras novohispanas de la eacutepoca que aun-que no fueron tan proliacuteficas y relevantes como Juana Ineacutes de la Cruz dejaron testimo-nio de algunos acontecimientos que tienen intereacutes socioloacutegico o testimonial Este es el caso de Dontildea Mariacutea Estrada Medinilla de igual nombre y apellido que la mujer que acompantildeoacute a las tropas de Corteacutes en su primera entrada a Meacutexico Natural de Meacutexico publicoacute toda su obra a mediados del siglo XVII concentraacutendose principalmente en la lle-gada del Marqueacutes de Villena virrey y capitaacuten general de la Nueva Espantildea a la ciudad de Meacutexico en el antildeo 1640 Escrita en octavas reales la obra trata de las fiestas de toros y cantildeas con que se obsequioacute al citado virrey Fue impresa en Meacutexico en 1641 (Serrano y Sanz 269 402)

Mucho maacutes importante para el presente libro es Dontildea Isabel de Guevara que escribioacute en 1556 la carta en que se expone la ayuda que ofrecieron las mujeres en el descubri-miento y conquista del Riacuteo de la Plata No cabe la menor duda de que esta carta es uno

142 Para una mejor comprensioacuten del caraacutecter de esta excepcional mujer veacutease entre los numeros trabajos publicados Fredo Arias de la Canal Intento de psicoanaacutelisis de Juana Ineacutes y otros ensayos sorjuanistas (Meacutexico Frente de Afirmacioacuten Hispanista 1972) 47

143 Veacuteanse entre otros trabajos Octavio Paz Sor Juana Ineacutes de la Cruz o las trampas de la fe Georgina Sabat de Rivers En busca de Sor Juana Margo Glantz Sor Juana la comparacioacuten y la hipeacuterbole Gerard C Flynn Sor Juana Ineacutes de la Cruz Stephanie Merrim Feminist perspectives on Sor Juana Ineacutes de la Cruz Pamela Kirk Sor Juana Ineacutes de la Cruz religion art and feminism

164 JUAN FRANCISCO MAURA

de los documentos maacutes importantes con que contamos en relacioacuten a la aportacioacuten fe-menina en el proceso de la conquista de Ameacuterica Su importancia viene dada por varios factores Primero es uno de los primeros testimonios mdashsi no el primeromdash en donde se expone abiertamente la indispensable colaboracioacuten de las mujeres en el descubrimien-to y conquista de tierras en el Nuevo Mundo laquoQue si no fuera por ellas todos fueran acabadosraquo En segundo lugar la informacioacuten vertida en estas liacuteneas presenta en parte la manera de pensar de una mujer espantildeola en tales circunstancias Extraordinario tes-timonio de primera mano que nos da una idea de lo que significoacute en muchos casos el valor y entrega constantes de muchas de estas mujeres que auacuten a riesgo de perder sus vidas no dudaron en luchar al lado de los hombres por una causa que consideraban laquocomuacutenraquo

La relevancia histoacuterica de dicha carta hace que merezca ser transcrita en su totali-dad

Carta de dontildea Isabel de Guevara a la princesa gobernadora dontildea Juana exponiendo los trabajos hechos en el descubrimiento y conquista del Riacuteo de la Plata por las mujeres para ayudar a los hombres y pidiendo repartimiento

para su marido Asuncioacuten 2 de julio de 1556

Muy alta y muy poderosa sentildeora

A esta provincia del Riacuteo de la Plata con el primer gobernador de ella don Pedro de Mendoza hemos venido ciertas mujeres entre las cuales ha querido mi ventura que fuese yo la una y como la armada llegase al puerto de Buenos Aires con mil quinientos hombres y les faltase el bastimento fue tamantildea el hambre que a cabo de tres meses murie-ran los mil esta hambre fue tamantildea que ni la de Jerusalem se le puede igualar ni con otra ninguna se puede comparar Vinieron los hombres en tanta flaqueza que todos los trabajos cargaban de las pobres mu-jeres asiacute en lavarles las ropas como en curarles hacerles de comer lo poco que teniacutean limpiarlos hacer centinela rondar los fuegos armar las ballestas cuando algunas veces los indios les veniacutean a dar guerra hasta cometer a poner fuego en los versos y a levantar los soldados los que estaban para ello dar arma por el campo a voces sargentean-do y poniendo en orden los soldados porque en este tiempo como las mujeres nos sustentamos con poca comida no habiacuteamos caiacutedo en tanta flaqueza como los hombres Bien creeraacute V A que fue tanta la so-licitud que tuvieron que si no fuera por ellas todos fueran acabados y si no fuera por la honra de los hombres muchas maacutes cosas escribiera con verdad y los diera a ellos por testigos Esta relacioacuten bien creo que la escribiraacuten a V A maacutes largamente y por eso cesareacute Pasada esta tan peligrosa turbunada determinaron subir el riacuteo arriba asiacute flacos como estaban y en entrada de invierno en dos bergantines los pocos que quedaron vivos y las fatigadas mujeres los curaban y los miraban y les guisaban la comida trayendo la lentildea a cuestas fuera del naviacuteo y animaacutendolos con palabras varoniles que no se dejasen morir que presto dariacutean en tierra de comida metieacutendolos a cuestas en los

165ESPANtildeOLAS DE ULTRAMAR EN LA HISTORIA Y EN LA LITERATURA

bergantines con tanto amor como si fueran sus propios hijos Y como llegamos a una generacioacuten de indios que se llaman tinbues sentildeores de mucho pescado de nuevo los serviacuteamos en buscarles diversos modos de guisados porque no les diese en rostro el pescado a causa de que lo comiacutean sin pan y estaban muy flacos Despueacutes determinaron subir el Paranaacute arriba en demanda de bastimento en el cual viaje pasaron tanto trabajo las desdichadas mujeres milagrosamente quiso Dios que viviesen por ver que en ellas estaba la vida de ellos porque todos los servicios del naviacuteo los tomaban ellas tan a pechos que se teniacutea por afrentada la que menos haciacutea que otra sirviendo de marear la vela y gobernar el naviacuteo y sondar de proa y tomar el remo al soldado que no podiacutea bogar y escotar144 el naviacuteo y poniendo por delante a los soldados que no se desanimasen que para los hombres eran los trabajos verdad es que a estas cosas ellas no eran apremiadas ni las haciacutean de obliga-cioacuten ni las obligaba si solamente la caridad Asiacute llegaron a esta ciudad de la Asuncioacuten que aunque ahora estaacute muy feacutertil de bastimentos en-tonces estaba de ellos muy necesitada que fue necesario que las muje-res volviesen de nuevo a sus trabajos haciendo rosas con sus propias manos rosando y carpiendo y sembrando y recogiendo el bastimento sin ayuda de nadie hasta tanto que los soldados guarecieron de sus fla-quezas y comenzaron a sentildeorear la tierra y adquirir indios e indias de su servicio hasta ponerse en el estado en que ahora estaacute la tierra He querido escribir y traer a la memoria de V A para hacerle saber la ingratitud que conmigo se ha usado en esta tierra porque al presente se repartioacute por la mayor parte de los que hay en ella asiacute de los anti-guos como de los modernos sin que de miacute y de mis trabajos se tuviese ninguna memoria y me dejaron de fuera sin me dar indio ni ninguacuten geacutenero de servicio Mucho me quisiera hallar libre para me ir a presen-tar delante de VA con los servicios que a SM he hecho y los agravios que ahora se me hacen mas no estaacute en mi mano porque estoy casada con un caballero de Sevilla que se llama Pedro de Esquivel que por servir a SM ha sido causa que mis trabajos quedasen tan olvidados y se me renovasen de nuevo porque tres veces le saqueacute el cuchillo de la garganta como allaacute VA sabraacute A que suplico mande me sea dado mi repartimiento perpetuo y en gratificacioacuten de mis servicios [en el origi-nal del AHN Diversos doc 141 dice ademaacutes mande que sea proveydo mi marido de alguacuten cargo conforme a la calidad de su persona pues el de su parte por sus servicios lo merece] lo merece Nuestro sentildeor acre-ciente su Real vida y estado por muy largos antildeos De esta ciudad de la Asuncioacuten y de julio 2 1556 antildeosServidora de V A que sus Reales manos besa

Dontildea Isabel Guevara

144 Sacar agua de un riacuteo acequia o presa

166 JUAN FRANCISCO MAURA

Sobremdash A la muy alta y muy poderosa sentildeora Princesa dontildea Joana Gobernadora de los reinos de Espantildea etc ndash En su Consejo de Indias (Isabel de Guevara 619-21)

Iroacutenicamente la carta teniacutea que llegar a manos de la desdichada heredera del trono de Castilla e hija de los Reyes Catoacutelicos Juana laquola Locaraquo que habiacutea muerto el antildeo an-terior Son profeacuteticas las palabras de esta mujer no soacutelo porque sus hechos personales quedasen en el olvido sino porque incluso se ha borrado la historia de las mujeres en el Nuevo Mundo negando su presencia Por lo menos Isabel Guevara tuvo acceso a una pluma iquestCuaacutentas seriacutean las que ni siquiera sabriacutean escribir

Otra contemporaacutenea fue dontildea Leonor de Iciz que vivioacute durante la segunda mitad del siglo XVI Interesa sobre todo por los sonetos que escribioacute en elogio de Ercilla soldado que participoacute en la conquista de Chile y que se inmortalizoacute con su obra La Araucana (Serrano y Sanz 269 534) Lo mismo hizo Dontildea Bernarda Lintildeaacuten en 1610 autora de otro soneto en memoria del capitaacuten Gaspar Peacuterez de Villagraacute que participoacute en la conquista de Nuevo Meacutexico (Serrano y Sanz 270 14) Los escritos de estas mujeres tratan de de dos de las eacutepicas maacutes dramaacuteticas de la conquista

En el Peruacute y en pleno siglo XVII aparece otra fundadora de conventos Sor Bernardina de Jesuacutes que ademaacutes fue comparada con Santa Teresa por la semejanza de sus laquocartasraquo con las de la santa de Avila Fue fundadora del convento de Tacunga en Quito maacutes tarde destruiacutedo por un terremoto Dice Serrano y Sanz con respecto a su biografiacutea un tanto legendaria que fue carmelita descalza de Lima y hermana de Dontildea Mariacutea Benavides y Esquivel abuela de D Pedro de Peralta Barnuevo (Serrano y Sanz 269 553) Dicen que esta santa se alimentoacute durante treinta antildeos con laquochochos y caacutescaras de naranja hecho tan raro como increiacuteble Cuando fallecioacute reparaban las monjas en ponerle una vara de azucenas porque habiacutea sido casada y aquellas flores aparecieron milagrosamente sobre el cadaacuteverraquo (Serrano y Sanz 269 553)

Otra limentildea del primer cuarto del siglo XVII con reputacioacuten de santa fue Dontildea Luisa Melgarejo En este caso no se trata de una religiosa de oficio sino de la mujer del doctor Juan de Soto La uacutenica diferencia es que dontildea Luisa al parecer teniacutea laquovisiones y reve-lacionesraquo lo que debioacute poner nervioso a maacutes de un miembro del tribunal del laquoSanto Oficioraquo que consideraron sus escritos laquoculpadosraquo De su papel de laquosantaraquo pasa por lo tanto al de laquoposesaraquo o laquoendemoniadaraquo El inquisidor de Lima Gaitaacuten escribioacute un infor-me donde a traveacutes de la opinioacuten puacuteblica y de otras averiguaciones se deciacutea que dontildea Luisa Melgarejo laquomujer santaraquo sabiacutea cuando las almas de los difuntos saliacutean del Purga-torio El diacutea 14 de noviembre de 1623 se decidioacute tomar posesioacuten de todos los cuadernos en los que habiacutea escrito las experiencias de todos sus laquoarrobos suspensiones extasis y revelacionesraquo Estos cuadernos una vez recogidos presentaron toda una serie de al-teraciones borrones adiciones enmiendas incluso diferente letra por lo que despueacutes de haber sido examinados resultaron culpables145 Excelente imaginacioacuten debioacute tener dontildea Luisa Melgarejo la suficiente al parecer para convencer a algunos miembros de la iglesia de que en sus escritos laquohabiacutea algoraquo que mereciacutea la pena Estas cosas ocurriacutean en Lima uno de los centros culturales maacutes importantes de la vida social y poliacutetica en la Ameacuterica espantildeola Lima a comienzos del siglo XVII seguacuten el empadronamiento llevado

145 Serrano y Sanz 270 47 Veacutease J T Medina Historia del tribunal del Santo Oficio de la Inquisicioacuten de Lima (1569-1820) (Santiago Imprenta Gutemberg 1887) Tomo II 34-41

167ESPANtildeOLAS DE ULTRAMAR EN LA HISTORIA Y EN LA LITERATURA

a cabo en 1614 por el marqueacutes de Montesclaros era una ciudad de 25000 habitantes de los que 11000 eran espantildeoles El nuacutemero de religiosos y religiosas llegaba a 1720 (Pittaluga 77)

Se sabe que en la Isla de Santo Domingo durante el siglo XVI nacioacute o al menos resi-dioacute una poeta de ceacutelebre apellido en los aconteceres del Nuevo Mundo Dontildea Elvira de Mendoza de la que se conserva un manuscrito en la Real Academia de la Historia laquoCantares miacuteos que estaacuteis rebeladosraquo Eugenio de Salazar hace un elogio de ella como poeta en un Soneto a la ilustre Poeta y Sentildeora Dontildea Elvira de Mendoza moradora en la ciudad de Santo Domingo (Serrano y Sanz 270 53)

Nacida en Burgos sobre el antildeo 1590 dontildea Luisa de Padilla merece un lugar aparte dentro del grupo de mujeres escritoras de su eacutepoca Por su estilo faacutecil y castizo su no-vedad de pensamientos y su rica erudicioacuten recibioacute el siguiente comentario de Manuel Serrano y Sanz laquoPocas figuras hay en nuestra historia literaria femenil que puedan compararse a esta eminente prosista acaso la maacutes notable de cuantas florecieron en Es-pantildea durante el siglo XVIIraquo (Serrano y Sanz 270 95-96) Este comentario y comparacioacuten deberiacutea ampliarse para que tambieacuten incluyese a laquola historia literaria varonilraquo

Dontildea Luisa fue defensora de la labor que la Inquisicioacuten estaba realizando en la laquolim-piezaraquo de mujeres laquosoldados del demonioraquo que existieron en algunas provincias espa-ntildeolas en aquel tiempo Muchas de las mujeres que combinaban la magia con los po-deres curativos fueron condenadas no solamente por hombres de la Inquisicioacuten sino tambieacuten por mujeres de todas las clases sociales como es el caso de Luisa de Padilla condesa de Aranda En su obra Elogios de la verdad e invectiva contra la mentira preveniacutea contra aquellos que practicaban artes en contra de la religioacuten cristiana La magiacutea negra seguacuten Padilla era la causante de que muriesen casi tantas personas como otras causas naturales habieacutendose descubierto hasta seis mil brujas en Vizcaya y Guipuzcua con-fesando una mujer de un pueblo pequentildeo haber matado con su laquomagiaraquo a ochocientas personas (Perry 31) Eran estos laquomales de ojoraquo y maldiciones seguacuten la autora las causas de que se secasen los pechos de las madres lactantes que se separasen las parejas casa-das y que abortasen las embarazadas (Perry 31)

Si se tiene en cuenta que dontildea Luisa estuvo emparentada con la maacutes rancia aristocra-cia de su tiempo o lo que es lo mismo con algunos de aquellos que en cierta manera dirigiacutean los destinos de Espantildea en aquella eacutepoca (Duques de Lerma Duque de Uceda Marqueacutes de Cueacutellar Conde de Santa Gadea Marqueacutes de Belmonte por citar algunos) se comprenderaacute mejor su identificacioacuten con una institucioacuten que en teoriacutea velaba por la salvaguarda de los valores laquoeternosraquo de una Espantildea destinada a ser la campeona del ca-tolicismo durante los siglos XVI y XVII El padre de dontildea Luisa fue don Martiacuten de Padilla y Manrique extraordinario militar que proboacute su valor contra enemigos moriscos ingle-ses holandeses piratas berberiscos y el renegado genoveacutes Muley Faxad Fue veterano de la batalla de Lepanto donde apresoacute a cuatro galeras y acompantildeoacute con su escuadra a la reina Dontildea Margarita de Austria cuando vino de Geacutenova en 1598 laquoHabiacutea obtenido a 24 de julio de 1587 el tiacutetulo de Conde de Santa Gadea y en 1596 el de Capitaacuten General de la Armada del mar Oceacuteanoraquo (Serrano y Sanz 27095-96)

Por otra parte tambieacuten se sabe que dontildea Luisa participoacute directamente y desde tem-prana edad en la praacutectica de algunas actividades intelectuales como la historia y la arqueologiacutea a la vez que dedicaba su tiempo a virtudes cristianas como la caridad y el socorro de los necesitados (Serrano y Sanz 270 97) Resulta mucho maacutes faacutecil compren-

168 JUAN FRANCISCO MAURA

der la postura ideoloacutegica de esta gran mujer si tienen en cuenta ademaacutes de los factores antes mencionados otros tantos de caraacutecter biograacutefico concernientes a su educacioacuten y matrimonio

Otra escritora fue la mexicana dontildea Mariacutea Casilda Pozo natural de Temestla (Meacutexi-co) Nacida en el mes de abril de 1682 dejoacute escrita su biografiacutea en 16 cuadernos el ma-nuscrito original se encuentra en la biblioteca del colegio de San Gregorio de Meacutexico Fue su confesor el jesuiacuteta Domingo Quiroga que fue quieacuten la incitoacute a escribir su obra (Serrano y Sanz 270 137) Sor Juana de San Antonio aparece a principios del siglo XVII formando parte de un grupo de religiosas espantildeolas que fueron a Manila por la ruta de Meacutexico Ademaacutes de distinguirse por sus cualidades personales su obra interesa por ofrecer informacioacuten testimonial y costumbrista acerca de la forma de vestir de chinos y japoneses (Serrano y Sanz 270 225)

Otra monja esta vez ecuatoriana fue Gertrudis de San Ildefonso Nacida en 1652 profesoacute su vocacioacuten en el convento de Santa Cruz de Quito dejando escrita su vida por mandato de su confesor el padre Martiacuten de la Cruz el cual hizo una biografiacutea laquoen tres gruesos voluacutemenesraquo Gertrudis de San Ildefonso murioacute en 1709 (Serrano y Sanz 270 300) en olor de santidad

Sor Mariacutea Ana Agueda de San Ignacio nacioacute el 3 de marzo de 1695 en la dioacutecesis de la puebla de los Angeles en un rancho del lugar de Santiago Tecaliacute (Serrano y Sanz 270300) Esta monja mexicana escribioacute varias obras durante su vida conventual a lo largo de la cual desempentildeoacute el cargo de priora por muchos antildeos Entre sus obras todas de caraacutecter piacuteo y de laquoamor divinoraquo escribioacute un curioso y laquocopiosoraquo tratado de la Leche virginal de la Soberana Madre de Dios El padre Fr Juan de Villa Saacutenchez hace el siguiente comentario al respecto laquoen que hablando primero en sentido natural de los beneficios que debemos a Nuestra Sentildeora pasa a tratar en sentido miacutestico y alegoacuterico enten-diendo en la leche la doctrinaraquo (Serrano y Sanz 270301) Mexicana fue tambieacuten Sor Petronila de San Joseacute que ejercioacute como abadesa del Real monasterio de Jesuacutes Mariacutea de la ciudad de Meacutexico Escribioacute Vidas de varias religiosas ejemplares obra que tiene su im-portancia ya que al parecer laquoDe esta obra se sirvioacute D Carlos de Siguumlenza y Goacutengora para escribir su Parayso Occidental (Meacutexico 1684) seguacuten eacutel mismo declara en el proacutelogo diciendo lsquoa quien si hay algo bueno en esta historia se le debe todorsquoraquo (Serrano y Sanz 270 354) Menos conocida fue su compatriota Sor Luisa de Santa Catalina natural de Xacona laquopueblo situado en las inmediaciones de Zamora (Meacutexico)raquo siendo bautizada en 1682 Escribioacute Cartas espirituales a su confesor el P Juan Loacutepez de Aguado (Serrano y Sanz 270 361-62)146

Todos estos escritos la mayoriacutea de ellos ignorados por el gran puacuteblico tienen la im-portancia de darnos una perspectiva diferente En otras palabras ensentildearnos la maacutes refinada sensibilidad de muchas mujeres que permanecieron y en su mayoriacutea siguen permaneciendo a laquooscurasraquo de una eacutepoca tan rica de la literatura espantildeola como fue el Siglo de Oro Este siglo fue tambieacuten en su dimensioacuten literaria y artiacutestica patrimonio de la mujer

146 Para profundizar en muchas de estas escritoras hispano-americanas la consulta de la Biblioteca Hispano-Americana de Beristain de Souza resulta de capital importancia

169ESPANtildeOLAS DE ULTRAMAR EN LA HISTORIA Y EN LA LITERATURA

Sor Nada ardores divinos de una monja adolescente escritos ineacutedi-tos de una recieacuten profesa del siglo XVI147

iexclQueacute encantadores son tus amores hermana miacutea espo-sa iexclQueacute deliciosos son tus amores maacutes que el vino Y el aroma de tus perfumes es mejor que el de los baacutelsamos Miel virgen destilan tus labios esposa miel y leche hay en tu lengua y el perfume de tus vestidos es como aroma de incienso (Cantar de los Cantares 4 10-11)

Sor Nada llamada asiacute por humildad seguacuten dice el Indice de manuscritos de la Biblio-teca Nacional de Madrid es uno de los ejemplos maacutes desconocidos e interesantes que tenemos de la poesiacutea y prosa amoroso-religiosa del siglo XVII Hasta la fecha nunca se habiacutea publicado su obra e incluso hasta el antildeo 1995 para mi sorpresa no habiacutea copias microfilmadas de sus manuscritos en la Biblioteca Nacional Serrano y Sanz en su libro Apuntes para una Biblioteca de Escritoras Espantildeolas hace una escueta y pasajera mencioacuten de esta mujer y de su obra (68-69) siendo eso todo lo que hasta ahora se sabiacutea de ella Sus escritos consisten en los siguientes manuscritos

1 laquoEn queacute consiste un verdadero amor de Diosraquo 9 hojas uacutetiles en 4ordm letra del siglo XVII Biblioteca Nacional de Espantildea Manuscrito 1295926

2 laquoPintura del Propio Amorraquo laquoPintura del propio Amorraquo 10 hojas uacutetiles en 4ordm letra del siglo XVII Biblioteca Nacional de Espantildea Manuscrito 1295927

3 laquoEsplicacioacuten sobre en queacute consiste la paz del Almaraquo laquoQuartillas aacute un Alma que padece soledad interiorraquo 7 hojas uacutetiles en 4ordm letra del siglo XVII Biblioteca Nacio-nal de Espantildea Manuscrito 1295828

En cuanto a su persona soacutelo se nos dice que laquose encubrioacute con este seudoacutenimo laquoSor Nadaraquo Esta monja desconocida de origen hispanoamericano posee toda la frescura e ingenuidad de una joven apasionada metida por vocacioacuten u obligacioacuten a ejercer la profesioacuten maacutes comuacuten para mujeres de cierta clase social de su tiempo En sus liacuteneas podemos encontrar un misticismo simple incluso en algunos momentos infantil pero a su vez lleno de una fuerza y sensualidad interior poco comuacuten en escritos de este geacute-nero que desborda los liacutemites del laquoamor divinoraquo a traveacutes de los diaacutelogos entre el Alma y el Esposo Sor Nada consigue proyectar su amor a Dios maacutes allaacute de una experiencia romaacutentica Su experiencia es sincera y genuinamente miacutestica trascendiendo la imita-cioacuten o la propia creacioacuten poeacutetica ficcionalizada (Hatzfeld 30) Algunos pasajes son de un

147 Veacutease mi artiacuteculo Sor Nada ardores divinos de una monja adolescente escritos ineacuteditos de una monja profesa del siglo XVIIraquo Espeacuteculo Revista de estudios literarios 26 (2004) 1-10 Universidad Complutense de Madrid http wwwucmesinfoespeculonumero26sornadahtml

170 JUAN FRANCISCO MAURA

alto contenido eroacutetico con sustantivos y metaacuteforas que recuerdan la maacutes iacutentima unioacuten amorosa en unos casos y el tierno amor maternal en otros

[T]e miro Jesus mio desnudo a las inclemencias del tiempo y ardien-do en puro fuego de Amor por la salud de las Almas y me ensentildeas a que te ame con todo mi corason y puresa de espiritu No atendiendo ni buscando umanos intereses ni a solisitar consuelos ni regalos espi-rituales que suelen empantildear la puresa del noble corason No mi Jesus amable pues antes me ensentildeaste tu puro Amor que desnudo sean [sic] de encaminar mis passos desde el pesebre asta la cuna en donde te miro tan desnudo como el pesebre y todo Sentildeor por mi Amor (Mss 12959 26 hoja 1 v)

El manuscrito (12959 27) de la mencionada serie de tres contiene algunas correccio-nes quizaacute hechas por el confesor o quizaacute por ella misma cuando se dirige con excesiva familiaridad y arrebatado fervor a su Amado148 He escogido el manuscrito (12959 Caja 28) en primer lugar por ser el ejemplo maacutes representativo de su poesiacutea y prosa En este manuscrito encontramos de forma maacutes directa que alegoacuterica toda la frescura de un diaacutelogo entre Jesuacutes y el alma que raya como diriacutea Cervantes laquoa la llana y sin rodeosraquo (667 lib 2 cap 38) con el doloroso y a veces desesperado deseo de la entrega y la unioacuten final con el Amado La ortografiacutea no ha sido corregida respetaacutendose el texto ori-ginal149 Veamos el siguiente fragmento

Mira que te amo con Amor de padre y con Amor de esposo el mas fino y puro enamorado que no tan solo me presio de darte mi mano sino tambien todo mi cuerpo y sangre para que con mi pan de vida te sustentes y te regales a tus anchuras y que con mi propio espiritu vivas en paz como tu lo deseas y que mis amores sean unico alivio en tus trabajos en esta mortal vida pues si esto es asi y sabes que muero por darte vida dime esposa mia de que te fatigas Dame querida tus bras-sos y dime si me amas como yo te amo (Hoja 4)

148 La antologiacutea de Promis ha procurado insertar entre los textos antoloacutegicos algunos que se refieren a la es-critura de mujeres fundamentalmente de aquellos generados en el interior de los espacios conventuales Estos textos se fundan como laquohistorias de vidasraquo y responden casi siempre a los requerimientos de los confesores de las monjas coloniales En este sentido resulta valiosiacutesima la incorporacioacuten de la llamada Relacioacuten autobiograacute-fica de Sor Ursula Suaacuterez como una muestra significativa de la escritura monjil entendida en esta eacutepoca (como tambieacuten en la tradicioacuten europea medieval) inserta en las denominadas laquolabores de manoraquo de las religiosas ya que el texto escrito por mandato se convertiacutea en una suerte de entramado o tejido linguumliacutestico es decir en un nuevo bordado que la mayor parte de las veces el confesor convertido en censor iba haciendo tachando y enmendando En la antologiacutea Promis agrega un texto de Sor Tadea Garciacutea de la Huerta titulado Relacioacuten de la inundacioacuten que hizo el riacuteo Mapocho de la ciudad de Santiago de Chile en el monasterio de Carmelitas titular de San Rafael el diacutea 16 de junio de 1783 se trata de un poema tipo romance escrito en versos octosilaacutebicos y que da cuenta de lo sucedido ese diacutea en el convento (Resentildea de la literatura del reino de Chile de Joseacute Promis Eddie Morales Pintildea httpwwwupaclpublicaciones2002literatura_promishtm)

149 Son frecuentes las faltas ortograacuteficas Una de ellas es el uso constante del seseo La ausencia de acentua-cioacuten y puntuacioacuten exceptuando alguacuten punto o coma arbitrario no seguido casi nunca de mayuacutescula inicial lo mismo que el uso igualmente aribitrario de la h o de b v r q g j m n x etc No olvidemos de la misma forma la laxitud linguumliacutestica existente en el siglo XVII (no sabemos a queacute parte de eacuteste pertenece el manuscrito) asiacute como la joven edad de la monja

171ESPANtildeOLAS DE ULTRAMAR EN LA HISTORIA Y EN LA LITERATURA

Los versos del presente manuscrito poseen la misma fuerza que tiene su prosa Con una estructura estroacutefica indefinida estaacuten aparentemente corregidos por alguien que tu-vo la oportunidad de conocer personalmente a la autora Muy probablemente se trate del padre al que hace referencia al principio del primer manuscrito laquoMandame el Pd que le declare en que consiste un verdadero amor a Diosraquo a continuacioacuten continuacutea con su caracteriacutestica humildad laquo[O]bedesere y dire lo q Dios me inspire segun mi rudesa y simplisidadraquo (Mss 12959 26) En cuanto a la fuerza pasional de esta joven observamos con cierta tristeza coacutemo aparece sublimada en sus escritos con toda la enegiacutea de una joven mujer llena de intensidad y vida pero encerrada en los liacutemites de un convento Veamos un ejemplo en donde responde el Alma en los siguientes versos

O mi enamorado Jesus O mi dulse y tierno amanteO alegria de los sielos O dulse Jesus amable

(Toda Sentildeor me derrito toda Sentildeor me desagoy quiero vivir por ti ea sentildeor abrasadme) [Tachado en el original]

Toda Sentildeor me derrito toda Sentildeor me desagoy quiero morir por vos ea Sentildeor que ya acabo

Ya tus amores me llaman ya tus perfumes me traencon suspiros y agonias Sentildeor hasta que te alcanse

O mi Jesus amoroso no puedo mas dilatarmeya la pasiensia me falta dulse Jesus abrasadme

(No puedo vivir sin vos no puedo mas dilatarmeya la pasiensia me falta dulse) [Tachado en el original]

No puedo vivir sin vos mi dulse Jesus amablepues me teneis echisada siendo mi esposo y mi Padre

Ay que me abraso Ay que me quemo del Amor deJesus nasareno como no tocan y tantildeen a fuego150

Estos versos llenos de arrebato sublimado conectan con toda la tradicioacuten miacutestica es-pantildeola que se remonta a Ramoacuten Llul y que culmina en el maacutes universal de nuestros

150 En toda la fuerza y simbologiacutea del amor maacutes iacutentimo del maacutes alto y sublime placer de la unioacuten de los amantes tal como lo encontramos en el Cantar de los Cantares y en San Juan de la Cruz Leemos en la Biblia

Ya me he quitado la tuacutenica iquestCoacutemo volver a vestirme Ya me he lavado los pies iquestCoacutemo volver a ensuciarlosMi amado metioacute su mano por el agujero (de la llave) y mis entrantildeas se estremecieron por eacutel Me levanteacute para abrir a mi amado Mis manos destilaron mirra y mis dedos mirra exquisita en el pestillo de la cerradura (5 3-5)

Nos ocurre lo mismo con San Juan de la Cruz en su insuperable poema laquoLlama de amor vivaraquo

iexclOh cauterio suaveiexclOh regalada llagaiexclOh mano blanda iexclOh toque delicadoque a vida eterna sabey toda deuda pagaMatando muerte en vida la has trocado

172 JUAN FRANCISCO MAURA

miacutesticos San Juan de la Cruz Esta tradicioacuten se extiende hasta finales del siglo XVII esto es hasta los finales del Barroco siendo un poco maacutes tardiacuteo en la Ameacuterica espantildeola Sin tener como propoacutesito discutir en el presente trabajo a queacute corriente miacutestica pertenece la obra de Sor Nada es necesario resaltar no obstante el hecho de que estaacute escrito por una mujer y ademaacutes de tierna edad El manuscrito 12959 Caja 26 termina con estas pa-labras laquo[T]odas estas boverias escrivi por entretenimiento siendo resien profesa en la religion Sor Nadaraquo Mas no por la juventud de su autora los escritos dejan de tener lo-gradas metaacuteforas imaacutegenes y siacutembolos sacados de la naturaleza La alegoriacutea de la unioacuten matrimonial poseeacute el fuego liacuterico de la maacutes apasionada de las relaciones amorosas vivi-ficada por perfumes flores insectos animales escarchas nieves o abrojos Por lo tanto aunque la narracioacuten destile cierta ingenuidad no carece por ello de un vocabulario rico con el sabor popular de la poesiacutea de los cancioneros y romances de tradicioacuten renacen-tista No ha sido otra mi intencioacuten que la de rescatar del olvido unos escritos en prosa y en verso llenos de frescura y espontaneidad que nos muestran la pasioacuten con que la joven novicia se laquoentrega en cuerpo y almaraquo a los menesteres de su profesioacuten guiada por un padre espiritual en esos primeros antildeos de formacioacuten Esta ha sido la razoacuten por la que presento a continuacioacuten el citado manuscrito en su totalidad

Sor Nada (Mss 1295928)

laquoEsplicacion sobre en que consiste la paz del AlmaraquolaquoQuartillas a un Alma que padece soledad interiorraquo

[7 hojas utiles en 4ordm letra del siglo XVII]

+

Esplicacion sobre en que consiste la paz del Alma

Pareseme segun mi rudo entender que la verdadera paz del Alma con-siste en una muy pura y buena consiencia en un corason liso y bien intensionado en una verdadera rectitud de espiritu en el qual el Alma procura bolar a Dios sin jamas detenerse a respetos umanos ni reparar en que me diran ni de que me censuraran sino me apresuro a seguir a unos entenderes y pareseres dorados en los quales pretende el mundo engantildear y ensuciar si se puede la puresa de un corason unicamente de Dios y de su Santa ley y se lo conserva cristalino con la divina asis-tencia de la gracia y comprendido de su Amor y temor siguiendo la luz divina de tan amante Sentildeor Dios y ombre verdadero con que este ilustrado corason ni se altera ni se mueve por los disfrasses dorados que ase el mundo y sus moradores mayormente con falssas amistades aunque con ellos muestre buena intension Con la misma grasia y luz de Dios conose el buen corason estos disfrasses que le ase el mundo y se retira de todo con espiritu y valor esto sin la menor alterasion sino que en suma paz se retira a buscar a Dios dentro de su mismo corason

173ESPANtildeOLAS DE ULTRAMAR EN LA HISTORIA Y EN LA LITERATURA

y se abrasa con su pura verdad en la qual se le descubren mil interio-res secretos tan solidos puros y verdaderos que la misma Alma queda abismada y de puro grandes no los puede bien comprender ni esplicar pero estos mismos secretos divinos le sirven de espuelas para no solo correr sino bolar con pies de plumas en seguimiento de su bien ama-do Jesus y como este soberano Sentildeor es tan amante de sus espossas las Almas luego que la ve bolar con pies de plumas la sale al encuen-tro en despoblado campo que se deve de llamar Campo de Amor de Dios y el mismo Sentildeor se viene a las manos por ser Dios que nos ama con Amor infinito de Padre benigno y amoroso con que asiendose en contra deso este divino enamorado en lo interyor de el Alma que le busca con ansias de servirle y amarle y en aquella soledad traban una conversasion amorosa y sensilla como la pluma simple de quien esto escrive

Divino enquentroDios y el Alma en la soledad

O Soberano Principe de la paz dise el Alma tus perfumes me traen a ti bolando porque alla en el mundo y sus valedores me pretendian engantildear y entretenerme con pegaminossas amistades que facilmen-te me pudieran envenenar y matarme apartandome de ti Mi dulse Jesus amable mi Redentor Soberano que con tantas ansias me sales al enquentro como siervo [ciervo] erido de mis Amores los quales tu Amor me ofrese para que con tu mismo Amor te ame y te sirva en paz sin perturbarme ni contristarme ni cansarme de padeser pasando si se ofrese por escarchas nieves espinas ni abrojos ni por otros diverssos trabajos ni piedras de contradision que tu me puedes permitir pues por mas que el mar se levante con sus ferosses olas contra mi ni piedras se me tiren al rostro en todo Sentildeor me quieres con serenidad pasifica sin la menor perturbasion Todo Sentildeor quieres que lo tome con Serenidad de espiritu y asi vengo a ti bolando para que mejor me ensentildees a vivir segun las leyes de tu noble condision que me son muy agradables por mas que el mundo me las despresie por segir sus vanidades y torsidas intensiones con apariensias de bien y con este engantildeo y bien me quie-ro mas a mi que no a mi proximo veo que segun mi pareser se pierden muchas Almas y tambien de aquellos que se depresian y pasan por muy espirituales Con que me paresen pocos los que llegan a padeser con desnudes151 de espiritu por tu purisimo Amor y me parese essas se quedan muy atrasadas en la virtud por el peligro de bolver muy atras el paso de modo que se pueden despentildear y pereser en su misma desgra-sia ya por soberbia o por otras enfermedades que se les pega al corason y asi lo pasan como siegos ignorantes sin advertir en sus peligros

151 La letra en cursiva es miacutea

174 JUAN FRANCISCO MAURA

este aquerdo Sentildeor y otros que tu verdad me ensentildea me ase venir uyendo de las paredes del mundo y me vengo a ti Dios mio bolando con las dos Alas del Amor y temor que tu mismo Amor me ofrese tan de gracia y tan de grado que no se duentildeo mio con que lo responder a tan soberano beneficio y finesa de tus entrantildeas de Amorvengo Sentildeor y esposo mio unicamente a descansar en ti pues los peli-gros del camino me an puesto en mucho sobresalto temiendo el per-derte y sin ti perderme para siempre por una eternidad sin fin pues deseo amado mio ganarme ganandote a ti y vivir en ti aora en vida y despues eternamente y estos cuidados me traen fatigada molida y cansada y no podre tener alivio y descanso sino viendome entre tus brassos aunque sea estando en cruz pues ese es el fin de mis deseos vivir y morir en ti ablame mi cordero manso y ensentildeame a que ver-daderamente te ame como fiel esposa ea mi caro amigo dame la ma-no pues sabes Amor mio que en mi no ay mano sin tu misma mano y asi mi Dios y Sentildeor mi Principe Soberano con umilde rendimiento y deseos de alcansarte te suplico me des la mano y me consueles en estos mis trabajos Deseo Sentildeor vivir en paz y los malos amores de mi Naturaleza flaca no me dejan detentar y no quieren por mi desgrasia atropellar con las leyes de tu Amor ni quisiera perturbar mi corason quando me veo con un torvellino de olas y contratiempos que a menu-do me suelen sercar pero si tu Sentildeor me das la mano nada temo sino que me aseguro y vivire en paz sin que me fatiguen los contratiempos pues mi mano en la tuya y mi espiritu en el tuyo por mas borrascas que me envistan no seran bastantes para rendir mi voluntad a la suya bien si para pronunsiar un fiat que resuene bien atras en tus oidos y que en medio de mis fatigas me ponga a cantar tus divinas misericor-dias hea Sentildeor ya pretendo serrar mis labios por no desir mas bove-rias y deseo Sentildeor oir tus palabras de vida eterna abla Sentildeor que tu sierva oye con atension y cuydado mira mi Dios que se me ase tarde y espero con prisa deseando saborearme y aprovecharme de los ecos de tu Santa dotrina pues todas tus palabras saben a eterna vida callen pues mis sentidos y potensias y todo se ponga en paz pues mi dulse y soberano Sentildeor no se escusara de ablar me aun que en mudo silensio hea mi gran Prinsipe de la paz ablame que tus puros amores me traen perdida por estos asperos montes y mis cortos pasos no te pueden dar alcanse mirame mi Dios a tus pies postrada como un vil gusano y me-nor ormiga de la tierraabla Jesus y dise a su esposa el Alma querida esposa mia que me pides y por que te muestras tan fatigada y mal sufrida no vives como corde-rita del campo buscando de mis pechos el sustancial pasto mi Amor no te sustenta y mi grasia te promete eterna vida pues dime amada de que te fatigas y te muestras mal sufrida mira que te amo con Amor de padre y con Amor de esposo el mas fino y puro enamorado que no tan solo me presio de darte mi mano sino tambien todo mi cuerpo y

175ESPANtildeOLAS DE ULTRAMAR EN LA HISTORIA Y EN LA LITERATURA

sangre para que con mi pan de vida te sustentes y te regales a tus an-churas y que con mi propio espiritu vivas en paz como tu lo deseas y que mis amores sean unico alivio en tus trabajos en esta mortal vida pues si esto es asi y sabes que muero por darte vida dime esposa mia de que te fatigas Dame querida tus brassos y dime si me amas como yo te amoResponde el Alma152 Tu mi Dios sabes si yo te amo pues de mi solo se que mis deseos y ansias buelan a ti mas no alcanso a saber si te amo como tu de-seas ser amado y como desconfio tanto de mi y de mis prosederes falssos temo Dios mio perderme y perderte y asi Sentildeor pues no desechas mis Amores y te muestras tan fino en amarme te pido me ensentildees a vivir segun las leyes de tu pura verdad y fina condisionhija mia dise Dios la prueva de un verdadero Amor consiste en sufrir callar y padeser por mi unico Amor y en todo seguir mis pasos sin ja-mas retroseder por mas fragoso que se muestre el camino pues nunca seran tantas las espinas las escarchas ni las nieves ni los vientos bo-rrascosos que te se ofrescan pasar por mi Amor como los que mi tierno y desinteresado Amor paso por ti y siempre con mis pies descalssos y asi hija y esposa mia muestrate costante en seguir lo perfecto de mis passos pues mi braso fuerte sera en ti y peleara por ti y te sera el todo en tus nesesidades y mi Amor te convertira en dulse y suave lo amargo y molesto a la condision de la carrne

Responde el Alma

O mi enamorado Jesus O mi dulse y tierno amanteO alegria de los sielos O dulse Jesus amable

(Toda Sentildeor me derrito toda Sentildeor me desagoy quiero vivir por ti ea sentildeor abrasadme) [Tachado en el original]

Toda Sentildeor me derrito toda Sentildeor me desagoy quiero morir por vos ea Sentildeor que ya acabo

Ya tus amores me llaman ya tus perfumes me traencon suspiros y agonias Sentildeor asta que te alcanse

O mi Jesus amoroso no puedo mas dilatarmeya la pasiensia me falta dulse Jesus abrasadme

(No puedo vivir sin vos no puedo mas dilatarmeya la pasiensia me falta dulse) [Tachado en el original]

No puedo vivir sin vos mi dulse Jesus amablepues me teneis echisada siendo mi esposo y mi Padre

152 La aparicioacuten de una mayuacutescula al principio de una oracioacuten es algo totalmente arbitrario en este ma-nuscrito dada la libertad ortograacutefica de la autora Como se puede observar en la mayor parte de las veces no es el caso

176 JUAN FRANCISCO MAURA

Ay que me abraso Ay que me quemo del Amor deJesus nasareno como no tocan y tantildeen a fuego

Responde Jesus Hija mia tus simples vozes oygo y aunque resuenan bien a mis oidos pero te deseo mas mansa y pasifica en tus fervores ya sabes que no siempre as de vivir en mantillas ni a los pechos de tu Madre por que es rason que padescas con espiritu fuerte como mu-jer valerosa por que a una esposa del Rey soberano y prinsipe de la paz no le estan bien chiquerias ni fervores de nintildea malcriada y ya es ora que la destete su Madre la Naturaleza y que empesando su nueva vida camine con el favor de mi grasia sigiendo mis passos de eterna vida esto con sus pies descalssos segun mis leyes de Amor puro y desinteresado lo tienen ordenado153 y vivir en paz como lo deje en-cargado a mis apostoles Santos repitiendoles varias vezes Vivir en pas y caridad esto es un vivir en Dios y Dios en el Alma y asi hija mia el Alma que vive en paz vive en mi Como mis cortesanos en el cielo y pues me pides que te ensentildee a vivir segun las leyes de mi condision Repito el desir que te debes mostrar sufrida en todo tiempo y estado sin permitir en tu corason que ni aun los fervores se adelanten con estremos ni ademanes sino atiende y aprende de mi purisima Madre pues siempre la veras si bien lo consideras que mientras vivio en el mundo en todos sus trabajos se mostro firme fuerte costante como piedra diamante Pues mirandome nintildeo entre sus brasos desnudo en el pesebre desnudo y crusificado en los brassos de una cruz En estos y otros passos no se mudo su rostro sino que en suma serenidad y pasifico corason toda se sacrificaba enteramente en los brassos de mi Amor y rendido su corason y voluntad en la de mi eterno Padre por ejemplo te la doy y deseo que aprendas de sus nobles calidades pues te aseguro carisima que las leyes de mi condision y pura verdad todo lo allaras enserrado en el corason de mi purisima Madre sedle fiel y descansaras en paz

+

Quartillas a un alma que padese soledad interior

1Un Alma afligida y tristese ve en un campo desiertay en el su esposo la tieneAtormentada y sedienta

153 Es a traveacutes de estas liacuteneas lo que hace suponer que la autora de este diaacutelogo amoroso entre el Alma y Je-suacutes es novicia esto es laquoque estaacute empesando su nueva vidaraquo En las mismas liacuteneas una vez maacutes se hace alusioacuten al laquodesteteraquo de su vida civil laquoa una esposa del Rey soberano y principe de la paz no le estan bien chiquerias ni fervores de nintildea malcriada y ya es ora que la destete su Madre la naturalesaraquo (fol 5)

177ESPANtildeOLAS DE ULTRAMAR EN LA HISTORIA Y EN LA LITERATURA

2Pendiente se ve en el AyreSolo un hilo la sustentasin tocar el pie en el sueloporque del no tome tierra

3Mirandola esta yto a ytoaquel sol que la atraviesay la enviste con sus rayosmas ella no pestantildeea

4Como sigarra padese y como a tal se atormentabatiendo sus mismas Alasy el corason se atraviesa

5Con penas sustos temoresquando se mira assi mesmasin tener valor en nadaporque es la misma flaquesa

6Pero el Amor de su esposotoda su atension le llevay la pone en un abismopero cubierto en tiniebla

7Desea dar algun bueloy subir con ligeresapero se mira travadacon una fuerte cadena

8Clama suspira y padeseMas del todo se sujetaRindiendo su voluntadA la divina clemencia

9Los enemigos del AlmaCruelmente le asen guerray ella aunque firme y constantelos reselos la atormentan

178 JUAN FRANCISCO MAURA

10de todos modos padeseaunque gosa la asistensiadel divino esposo amadoque en su interior se recrea

11Solo de verla penary con verla tan serenadise resibe mil gustosde su sigarra pequentildea

12Le sabe el mundo a mil yelesy su trato le atormentaviendo en el mil falsedadesque todas saben a tierra

13Para poderse librardeja de correr y buelacon las Alas del Amory el mismo Amor se la lleva

Una vida dedicada a un amor divino un amor que le haraacute llenar un buen nuacutemero de cuartillas dedicadas a tan alta empresa Se desconoce si la vocacioacuten de Sor Nada con-tinuoacute con tanta intensidad el resto de sus diacuteas Ciertamente la vida en el covento no era faacutecil En algunos casos la experiencia era traumaacutetica incluso fatal para algunas de las adolescentes de la Ameacuterica Espantildeola Las reglas del claustro eran severas por varias razones Estas joacutevenes si no teniacutean el permiso de la superiora no podiacutean recibir visitas no podiacutean volver a sus casas su correspondencia era censuraba y no podiacutean salir del periacutemetro conventual Igualmente se levantaban antes del amanecer para oir misa tra-bajaban el resto del diacutea y lo maacutes interesante es que muchas veces esta vida era aceptada por muchas

Page 7: Tercera parte: Mujeres en la vida intelectual - …parnaseo.uv.es/Editorial/Maura/TerceraParte.pdf · La Biblia, por su parte, hace repetidas menciones de la mujer y sobre el comporta-

137ESPANtildeOLAS DE ULTRAMAR EN LA HISTORIA Y EN LA LITERATURA

Mundo con la idea de encontrar al hombre de sus suentildeos en este caso al conquistador llevaacutendose una gran sorpresa al comprobar coacutemo las heridas las inclemencias del tiem-po y las enfermedades habiacutean dejado sus huellas en los rostros de estos hombres que no eran como se los imaginaban Este fue el comentario de una de las doncellas casade-ras que llevoacute don Pedro de Alvarado a Guatemala

iquestDicen que nos hemos de casar con estos conquistadores dixo una dixo otra iquestcon estos viejos podridos nos habiacuteamos de casar caacutesese quien quisiere que yo por cierto no pienso casar con ninguno dellos dolos al diablo parece que escaparon del infierno seguacuten estaacuten de estro-peados Unos cojos otros mancos otros sin orejas otros con un ojo otros con media cara y el mejor librado la tiene una dos y tres vecesraquo Dijo la primera laquoNo hemos de casar con ellos por su gentileza sino por heredar los indios que tienen que seguacuten estaacuten de viejos y cansados se han de morir presto y entonces podremos escoger el mozo que qui-sieacuteremos en lugar del viejo como suelen trocar una caldera vieja y rota por otra sana y nueva (Garcilaso vol 2 lib 2 cap 1 80)

Al escuchar estas palabras un caballero que se encontraba al otro lado de la cortina donde estaban hablando no pudieacutendolo sufrir maacutes las afrentoacute pasando luego a decir-les a los caballeros los laquobuenos deseosraquo de las damas Se marchoacute a su casa llamoacute a un cura y se casoacute con una india con la que ya teniacutea dos hijos a los que legitimoacute para que no pasasen a ser esclavos o criados de ninguna de esas sentildeoras (Garcilaso vol 2 lib 2 cap 1 81)

Muchas de estas primeras mujeres pasaron a ser viudas varias veces a causa precisa-mente de la muerte del marido en las diferentes campantildeas de los primeros antildeos

Fueron las descendientes de las mujeres que vinieron con los conquistadores las que de una manera definitiva asentaron las raiacuteces de una nueva sociedad que llegariacutea al mismo esplendor y refinamiento que la de la metroacutepoli El trasplante ya estaba realiza-do La violencia del laquoencuentroraquo de los primeros antildeos habiacutea dado como fruto una nueva sociedad que habiacutea heredado las bases de la cultura espantildeola y que teniacutea ademaacutes todo el encanto y riqueza de las variadiacutesimas culturas precolombinas

La primera generacioacuten corresponde ya a la mujer criolla hija de pobla-dora aquella que educoacute a los hijos propios y a los ajenos suavizando las costumbres baacuterbaras de la eacutepoca belicista Lo cierto es que a pesar de todas las vicisitudes la mujer hizo posible la creacioacuten del hogar en el que se fraguoacute la transculturacioacuten la sociedad gracias a su presencia fue perdiendo vulgaridad hasta alcanzar un notorio refinamiento Aun-que la paz tardoacute en llegar las treguas favorecieron el asiento en villas y ciudades En ellas florecioacute el romancero y la copla medieval junto a la arquitectura goacutetica el balcoacuten canario y el patio andaluz (Borges 436)

Ya fuese en la ciudad de Meacutexico o en la de Lima la mujer criolla gustaba de todas aquellas sofisticaciones que podiacutean disfrutar las mujeres de Sevilla o de la corte To-das teniacutean ademaacutes criados A mediados del siglo XVI empezaraacuten las navegaciones en-tre Meacutejico y las Filipinas lo que contribuiraacute a enriquecer los atuendos de las mujeres criollas asiacute como espantildeolas con artiacuteculos tan exoacuteticos en su diacutea pero tan castizos hoy

138 JUAN FRANCISCO MAURA

como el mantoacuten de Manila o el abanico Fray Reginal de Lizaacuterraga dice sobre las mu-jeres del Peruacute

La criolla es ademaacutes mujer que gusta de la ostentacioacuten y del lujo vi-cios muy femeninos que en parte la compensaban de pasadas o futu-ras calamidades En el Peruacute el vestuario se hizo tan ostentoso laquoque casi no se sabe coacutemo lo pueden sufrir los maridosraquo La soberbia de ellas es demasiada y no sabemos en lo que ha de parar no creo que hay en lo descubierto del mundo ciudad en su tanto ni cuatro veces mayor que a tanta soberbia en este particular como esta nuestra ciudad llegueCon justo tiacutetulo se podriacutea moderar por los virreyes esta soberbia Pe-ro no seacute por queacute no se modera y siacute seacute por queacute ni los maridos tienen aacutenimo para moderarlo ni los gobernadores tampoco (Lizaacuterraga 38 lib 1 cap 51)

La mujer criolla participa en todos los aconteceres de su sociedad Estaacute presente en todos los acontecimientos sociales y con frecuencia econoacutemicos sin dejar por ello de controlar la vida del hogar Al igual que en Espantildea ellas se encargaraacuten de casar a sus hijas e hijos unos destinados a mantener la tradicioacuten familiar y enriquecerla otros a engrosar las filas de la iglesia

Mujeres en la vida intelectual espantildeola durante los siglos XVI y XVII131

Great genuine and extraordinary work can be done only in so far as its author disregard the method the thoughts the opinions of his contemporaries and quietly works on in spite of their criticism on his side despising what they praise No one becomes great without arrogance of this sort (Shopenhauer The Art of Literature)

De igual manera que se ha querido excluir a la mujer de las primeras paacuteginas del encuentro con el Nuevo Mundo otro tanto ha ocurrido con la labor intelectual de tan insignes mujeres Muchas pese a lo remoto de sus asentamientos lograron dar a luz los maacutes valiosos frutos de la poesiacutea liacuterica de su tiempo132 Un gran nuacutemero de estas mujeres dada la estratificacioacuten social de su eacutepoca desarrolloacute su labor en conventos Otras sin embargo hicieron lo mismo compaginando sus vidas matrimoniales con las tareas culturales La vida monacal daba ventaja en cierta forma a la hora de conseguir la independencia deseada para dedicarse por completo al mundo de las letras sin que un

131 Veacutease mi artiacuteculo laquoCara y cruz de la mujer hispana imaacutegenes del siglo XVIraquo132 Veacutease el ejemplo de Mariacutea de Alvarado la Amarilis de Lope de Vega que escribioacute su obra en los maacutes

apartados rincones de los Andes peruanos Veacutease Meneacutendez y Pelayo Marcelino Historia de la Poesiacutea Hispano-Americana 84

139ESPANtildeOLAS DE ULTRAMAR EN LA HISTORIA Y EN LA LITERATURA

marido o unos hijos se interpusiesen en el tiempo concentracioacuten y dedicacioacuten que una actividad artiacutestica requiere Pese a todo no siempre fue asiacute El maacutes conocido ejemplo lo tendriacuteamos en Sor Juana Ineacutes de la Cruz la cual tuvo que sufrir problemas con algunos altos cargos eclesiaacutesticos asiacute como envidias de propios y extrantildeos por ser entre otras cosas superior en inteligencia y cultura a la mayor parte de sus contemporaacuteneos

Muchos conventos estaban bien provistos de libros a menudo donados por aquellas familias que teniacutean alguacuten miembro dentro del convento o simplemente por simpati-zantes de las diferentes oacuterdenes religiosas En la paz del claustro algunas de estas mu-jeres llegaron a adquirir un formidable desarrollo intelectual Pero a pesar de la calidad del material que existe sobre tan insignes mujeres se las ha preferido mantener en la oscuridad Como deciacutea con ironiacutea el pensador espantildeol Benito Feijoacuteo (1676-1764) sobre las disputas entre hombres y mujeres laquoLo cierto es que ni ellas ni nosotros podemos en este pleito ser jueces porque somos partes y asiacute se habiacutea de fiar la sentencia a los aacutengeles que como no tienen sexo son indiferentesraquo (46)

El escritor argentino Vicente G Quesada ya se quejaba a principios del presente si-glo de la pobriacutesima informacioacuten que ofreciacutea la enciclopedia francesa Larousse sobre la vida colonial en Meacutexico cuando refirieacutendose a eacutesta deciacutea lo siguiente laquoLos uacutenicos libros que se conociacutean eran el almanaque el catecismo del P Ripalda el Antildeo cristiano la vida de los santos y otros de ese geacuteneroraquo (Quesada 125) El mismo autor refutando lo anterior escribe

Por uacuteltimo recordareacute la notabiliacutesima publicacioacuten moderna La Bibliogra-fiacutea mejicana del siglo XVI eruditiacutesima y que constituye el maacutes concluyen-te testimonio para desautorizar la ligereza del Dictionnaire de Larousse que afirma lo que ignoraEl celebrado escritor mejicano don Francisco Pimentel ha publicado su erudita obra Historia criacutetica de la literatura y las ciencias en Meacutejico desde la conquista hasta nuestros diacuteas es un trabajo que comprende cuatro partes divididas asiacute Novelistas oradores historiadores y autores cientiacuteficos Por esta breve relacioacuten se comprende que es temeridad indisculpable pretender dar noticias del movimiento intelectual en el virreinato de Meacutejico sin conocer las obras de Pimentel y de Garciacutea Icaz-balceta ni la edicioacuten primitiva o corregida de Beristain (126)

En los maacutes importantes nuacutecleos urbanos de Meacutexico y Peruacute se podiacutea apreciar clara-mente la participacioacuten directa de la mujer en las maacutes diversas actividades sociales y cul-turales Esta participacioacuten llegoacute incluso al extremo de algunas mujeres que insultaron li-teralmente a las autoridades competentes cuando lo creyeron necesario laquoEstas mujeres que lloran seriacutean las mismas que creyeron como causa principal de aquellas muertes las disposiciones de las Leyes Nuevas porque no tuvieron empacho de insultar al virrey Blasco Nuacutentildeez Vela a quien lsquodieron gritasrsquo (sic) las espantildeolas y lo maldijeron como si llevara consigo la ira de Diosraquo (Borges 52) Lo mismo ocurre en la peniacutensula Dentro del plano cultural durante la primera mitad del siglo XVII destacaraacute entre los escritores de su tiempo Mariacutea de Zayas y Sotomayor gran novelista y defensora de los atributos de su sexo cuya obra narrativa y dramaacutetica disfrutoacute de una gran popularidad en la peniacuten-sula asiacute como en Hispano-Ameacuterica laquoCasi no ha habido novelista maacutes simpaacutetico a los lectores espantildeoles que Dontildea Mariacutea de Zayas seguacuten las muchas reimpresiones que se han hecho de sus obrasraquo (E Fernaacutendez de Navarrete xcvii) Entre sus admiradores contoacute

140 JUAN FRANCISCO MAURA

con el infatigable y genial Lope de Vega que la elogioacute en su obra El laurel de Apolo laquoNo desaprovechoacute Dontildea Mariacutea ninguna ocasioacuten de abogar por las mujeres contra la tiraniacutea de los hombres suponiendo que como deacutespotas las quieren ignorantes para tenerlas sujetasraquo (E Fernaacutendez de Navarrete xcvi)

Pero no tiene que ser exclusivamente una mujer la que defienda los atributos y los derechos de su sexo Se podriacutean citar varios ejemplos donde desde los inicios de las letras espantildeolas la mujer aparece comprendida e incluso defendida por escritores con-temporaacuteneos Veacuteanse los siguientes versos escritos en el siglo XIV por el genial Arcipres-te de Hita

Mujeres abrid los oiacutedos y escuchad una buena leccioacuten escuchad estas palabras guardaos del varoacuteniexclGuardaos no os acaezca como el leoacutenal asno sin orejas y sin su corazoacuten(892)133

No se puede despreciar la influencia que tuvo en la Espantildea del siglo XVI Erasmo de Roacutetterdam el intelectual maacutes reputado de su tiempo Erasmo con una clarividencia mental poco comuacuten trata de los temas maacutes cotidianos asiacute como de los maacutes profun-dos Sus escritos siempre al borde de lo hereacutetico dejaron bien claro su independencia ideoloacutegica Tambieacuten supo dar su opinioacuten sobre las mujeres y de la importancia que una buena educacioacuten supondriacutea a la hora de llevar a cabo las tareas diarias

With regard to female education Erasmus is unequivocal In Abbatis et eruditae he categorically states that education and learning are as desirable in a woman as in a man And although there is naturally no suggestion that the education and learning should be directed towards a career there are no carping restrictions as to what the education should consist of or where the learning should end (McKendrick 9)

Fue una mujer en particular la que llamoacute la atencioacuten del erudito holandeacutes Catalina de Aragoacuten hija de Isabel la Catoacutelica Grandes debieron ser las virtudes de esta dama cuando tan renombrados laquolibrepensadoresraquo la calificaban como laquomilagro del aprendi-zaje femeninoraquo

At the centre of the movement was a Spanish woman Catherine of Aragon first wife of Henry VIII of England Her mother Isabel la Catoacutelica had made sure that Catherine and her sisters received an advanced and enlightened education under two eminent Italian hu-manists Antonio and Alessandro Geraldini and Catherine herself was considered by Erasmus and Sir Thomas Moore to be a miracle of fe-male learning At her request Juan Luis Vives between 1524 and 1528 wrote his De institutione feminae christianae for her daughter Mary and he dedicated it to Catherine (McKendrick 6)

La pobre Catalina ya presagiaba su triste final Existe una dramaacutetica y muy poco co-nocida carta conservada en la Academia de la Historia donde eacutesta escribe a su sobrino el emperador Carlos V pidieacutendole ayuda y proteccioacuten a su desesperada situacioacuten en Inglaterra

133 Juan Ruiz Libro de Buen Amor 193

141ESPANtildeOLAS DE ULTRAMAR EN LA HISTORIA Y EN LA LITERATURA

Muy alto y poderoso sentildeor por las letras que a vuestra magestad e escrito a visto el tenor que siempre en este my negocio e tenido agora que veo el peligro que tanto tiempo lo e esperado torno a suplicar lo mismo que asta agora e echo y es que por permisioacuten de dios y por el deudo y sangre que entre vuestra magestad y my ay quiero de vos es-pecial memoria del peligro en que estoy y de los ynconvenientes que se espera allende que dios muy grande mire para ofendido si el Rey my sentildeor pone en efecto lo que todo este reyno tome en este parlamento de todo lo que para estar informado vuestra magestad por su embaxa-dor que aquiacute reside para el remedio tengo esperanza en dios bastaraacute lo que vuestra alteza proveeraacute conque se aga con tiempo no tengo maacutes que decir sino que todo ese reyno y maacutes los perlados y doctas personas que en esta causa defienden estaacuten muy sentidos de la dilacioacuten que su santidad del papa en este negocio a dado y quexanse mucho dello pues por vuestra parte nunca sino justicia se le a demandado y estaacuten el diacutea de oy tan firmes como asta agora para averlo de declarar donde fueren y debe ser entyendese esto poniendo la question como puacuteblicamente se platica que para en lo secreto no ay necesidad de ablar en ello y crea vuestra magestad de que esta verdad y dios me sostienen porque para proseguir mis trabajos no vastaraacute cuerpo humano y confiando en eacutel le suplico guarde la vida de vuestra magestad y acreciente su estado como yo deseo Degramache a 11 de enero= Humilde tiacutea de vuestra magestad= Catalina (RAH Atoacutegrafo precioso Caja 3 Nuacutem 23 Dontildea Catalina de Aragoacuten Reina de Inglaterra Antildeo 1530 Carta al emperador Carlos V pidieacutendole proteccioacuten)

La pobre Catalina presagiaba su triste fin ya que seis antildeos despueacutes la que fuera hija menor de los Reyes Catoacutelicos pasariacutea a mejor vida El no haber podido dar un hijo he-redero al rey Enrique VIII hizo que eacuteste se casase con Ana Bolena declarando nulo su matrimonio anterior sin consentimiento del Papa Roma le excomulgoacute pero eacutel mismo se proclamoacute jefe de la iglesia anglicana A pesar de todo Catalina muere enamorada de su marido y estas uacuteltimas liacuteneas con las que termina su uacuteltima carta y su vida son sufi-cientemente expliacutecitas laquoJuro que sobre todas las cosas mis ojos desean volver a verosraquo (Ximeacutenez de Sandoval 131)

Pese a la enorme influencia directa o indirecta que Erasmo tuviese sobre los pensado-res de la Espantildea del siglo XVI no debemos dejar de destacar tambieacuten la de Fray Luis de Leoacuten tanto por su cariz independiente como por ser un defensor de la libertad indivi-dual Auacuten siendo un representante de la iglesia Catoacutelica tuvo como se sabe que sufrir sus criacuteticas y el rechazo a la exposicioacuten de sus ideas escritos y traducciones biacuteblicas Fray Luis en su obra La perfecta casada deja clara su idea sobre la mujer y la funcioacuten que eacutesta debiacutea ocupar en la sociedad que le tocoacute vivir Para Fray Luis la mujer no era una imagen idealizada del laquoamor corteacutesraquo como la de los escritores neoplatoacutenicos sino un ser de carne y hueso con derechos y responsabilidades en la sociedad de igual manera que el hombre (McKendric 10)

Seriacutea exagerado afirmar que Fray Luis de Leoacuten pone a la mujer por encima del hom-bre en el contexto social Sin embargo y siempre teniendo en cuenta las limitaciones a

142 JUAN FRANCISCO MAURA

las que su profesioacuten y su tiempo le obligaban procura dejar claro que la mujer (casada) merece todo el respeto y ayuda que sea posible de su marido

Porque aunque es verdad que la naturaleza y estado pone obligacioacuten en la casada como decimos de mirar por su casa y de alegrar y des-cuidar continuamente a su marido de la cual ninguna mala condicioacuten de eacutel la desobliga pero no por eso han de pensar que ellos tienen licencia para serles leones y para hacerlas esclavas antes como en todo lo de-maacutes es la cabeza el hombre asiacute todo este trato amoroso y honroso ha de ser principio del marido Porque ha de entender que es compantildeera suya o por mejor decir parte de su cuerpo (Fray Luis de Leoacuten 21 cap 3)

En el reciente estudio de Mar Martiacutenez Goacutengora Discursos sobre la mujer en el Huma-nismo renacentista espantildeol se presenta esa posicioacuten ambigua del fraile agustino en refe-rencia a la funcioacuten de la mujer en la sociedad renacentista

Fray Luis se opone a la funcioacuten otorgada en la eacutepoca a la mujer de mera imagen pasiva Sin embargo fray Luis totalmente encardinado en la cultura del Renacimiento es consciente de la imposibilidad de ignorar ciertos presupuestos De ahiacute la frecuencia en la que el autor anima a las mujeres a buscar una laquofamaraquo puacuteblica que soacutelo una voz masculina puede proveerles Si la mujer desempentildea perfectamente su funcioacuten de casada el marido recibiraacute honra haciendo posible para ella ser alabada por los miembros de la comunidad (187)

Ya se ha mencionado a Isabel la Catoacutelica como impulsora de toda la empresa ultra-marina pero es precisamente gracias a su influencia cuando se pone de moda entre di-versas damas de su tiempo mdashsiglos XV y XVImdash la praacutectica de ciertos estudios y ciencias Beatriz Galindo conocida popularmente como laquoLa latinaraquo fue la que ensentildeoacute latiacuten a la reina Isabel Dice Juliaacuten Juderiacuteas en su obra La Leyenda Negra laquoA los hombres se unen las mujeres en este afaacuten de saber y vemos a Dontildea Beatriz Galindo maestra de latiacuten de la Reina a dontildea Luciacutea de Medrano que explicoacute los claacutesicos en Salamanca a dontildea Fran-cisca de Lebrija que desempentildeoacute una caacutetedra de retoacuterica en la Universidad de Alcalaacuteraquo (Juderiacuteas 74)

Nos cuenta Eustaquio Fernaacutendez de Navarrete que a la muerte del ceacutelebre Antonio de Nebrija quien a impulsos de la reina catoacutelica publicase la primera gramaacutetica europea en lengua romance su hija Antonia le supliacutea en las clases de filosofiacutea y retoacuterica en la Uni-versidad de Alcalaacute cuando eacuteste se encontraba ya viejo y enfermo (xcvi)

No existe ninguna razoacuten para pensar que las las mujeres de clases maacutes favorecidas que pasaron al Nuevo Mundo no disfrutaran de los mismos beneficios y libertades que sus homoacutelogas peninsulares Seraacute preciacutesamente uno de los hijos del mismo Antonio de Nebrija el doctor Sancho de Lebrija quien se encargue de dar poder a Antoacuten Pareja sastre para que la obra escrita de su padre tanto en latiacuten como en romance se distri-buya y venda laquoasiacute en Indias como en otras partesraquo (AHPS Libro del antildeo 1536 Oficio IV Fragmento de un libro Escribaniacutea Cristoacutebal Becerra Folio Primer tercio del legajo Fe-cha 31 de diciembre) En cuanto a las clases menos favorecidas la monarquiacutea espantildeola se preocupoacute desde un primer momento de alfabetizar a todos sus suacutebditos hembras y varones incluyendo los naturales de los territorios conquistados

143ESPANtildeOLAS DE ULTRAMAR EN LA HISTORIA Y EN LA LITERATURA

La educacioacuten de los indiacutegenas americanos fue una sincera preocupa-cioacuten de los reyes de Espantildea casi desde el descubrimiento del Nuevo Mundo Entre las primeras instrucciones de los Reyes Catoacutelicos a sus gobernadores de las Islas Antillas figuran las dadas a Nicolaacutes de Ovan-do en 1503 ordenaacutendole levantar en cada pueblo una escuela junto a la iglesia laquoen la que todos los nintildeos que hubiere en cada una de dichas poblaciones se junten dos veces al diacutea para que alliacute el capellaacuten les ensentildee a leer y a escribirraquo (Vega 9-10)

En la obra renacentista de Cristoacutebal de Villaloacuten El Crotaloacuten se ofrecen unas imaacutegenes muy graacuteficas de las mujeres de la eacutepoca y del laquoexceso de libertadraquo que seguacuten el autor en boca de uno de sus personajes disfrutaban Desde el punto de vista antropoloacutegico y social las siguientes liacuteneas ofrecen una buena imagen de la apariencia fiacutesica de las mujeres de su tiempo y de su actitud vista desde la perspectiva parcial del personaje de la obra

Pues aun no pienses Demophon que la vanidad y perdicioacuten destas livianas mujeres se le ha de pasar a Dios sin castigo que yo te oso afirmar por cosa muy cierta y que no faltaraacute Que por ver Dios su disolucioacuten desenvoltura desverguumlenza y poco recogimiento que en ellas en este tiempo hay visto que asiacute viacutergenes como casadas viudas y solteras todas por un comuacuten viven muy suelta y muy disolutas en su mirar andar y meneo muy curiosas y que por la calle van con un cu-rioso paso en su andar descubierta su cabeza y cabello con grandes y deshonestas crenchas muy alto y estirado el cuello guintildeando con los ojos a todos cuantos topan haciendo con sus cuerpos lascivos meneos (Villaloacuten 860-61 vol 2 canto 20)

El pasaje antes citado pese a parecer humoriacutestico en nuestros diacuteas no lo era tanto en la eacutepoca en que fue escrito ya que la visioacuten de la mujer como parte integrante del pa-trimonio del padre o del marido podiacutea de alguna manera poner en juego laquola honraraquo de su posesor Pese a esto se aprecia como la mujer teniacutea cierto margen de libertad que no se limitaba a las caacutemaras de un convento o a una vida totalmente alejada del mundanal ruido En la siguiente cita continuacioacuten de la anterior se puede observar la serie de ac-cesorios y aderezos que las mujeres de la eacutepoca utilizaban en sus vestidos y cuerpos llamando la atencioacuten la complejidad y sofisticacioacuten de los atuendos descritos

Por esta su comuacuten deshonestidad se cierto que vendraacute tiempo en el cual ha de hacer Dios un gran castigo en ellas pelarse han todos sus cabellos hacieacutendolas a todas calvas y seraacute tiempo en que les quitaraacute Dios todos sus joyeles sortijas manillas zarcillos collares ajorcas y apretadores de cabeza Quitarles ha los partidores de crenchas tenaci-cas salsericas redomillas y platericos de colores y todo geacutenero de afei-tes sahumerios guantes adobados sebos y unturas de manos y otros olores Alfileres agujas prendedores Quitarles ha las camisas muy del-gadas y los manteos vasquintildeas briales saboyanas nazarenas y rebo-cinos y en lugar de aquellos sus cabellos encrespados y enrifados les daraacute pelambre y calvez y en lugar de aquellos apretadores y joyeles

144 JUAN FRANCISCO MAURA

que les cuelgan de la frente les daraacute dolor de cabeza y por cinta de ca-deras de oro muy esmaltadas y labradas les daraacute sogas de muy aacutespero esparto con que se cintildean y aprieten y por aquellos sus muy curiosos y suntuosos ataviacuteos de su cuerpo les daraacute siacutelici y desta manera haraacute Dios que lloren su lascivia y desorden y que de su lujuria y deshonestidad hagan grave penitencia Entonces no habraacute quien las quiera por su he-diondez y miseria en tanto que siete mujeres se encomendaran a un varoacuten y eacutel de todas huiraacute menospreciaacutendolas y aborrecieacutendolas como de gran mal (Villaloacuten 860-61 vol 2 canto 20)

Excelente lista de aderezos femeninos de los cuales pocos son reconocibles en nues-tros diacuteas Gran frustracioacuten debiacutea de tener con las mujeres el autor de estas liacuteneas sien-do al parecer muy poco correspondido por estas uacuteltimas La misoginia que aparece en estas liacuteneas refleja cierta ingenuidad La mujer que se nos presenta debioacute de ser bastante atractiva y sofisticada portando una gran variedad de adornos muchos de ellos de origen oriental y de perfumes que poco tendriacutean que envidiar a los de la mujer moderna En Descripcioacuten breve de toda la tierra del Peruacute Tucumaacuten Riacuteo de la Plata y Chile obra escrita en Chile entre 1603 y 1609 por el padre Reginaldo de Lizarraga nacido en Medelliacuten (Espantildea) en 1545 y trasladado a Ameacuterica a los quince antildeos vemos una asombrosa semejanza con la cita anterior En esta obra del padre dominico dedicada al entonces presidente del Consejo de Indias conde de Lemos observamos coacutemo su descripcioacuten de la vestimenta de las mujeres de Lima ofrece notables semejanzas con la escrita unos antildeos antes en Espantildea En su capiacutetulo 51 titulado laquoDe los vestidos de las mujeresraquo dice lo siguiente

Lo que en esta ciudad [Lima] se admira mucho y aun lo que se ha-biacutea de refrenar es los vestidos y trajes de las mujeres son en esto tan costosas que casi no se sabe como lo pueden sufrir sus maridos La soberbia de ellas es demasiada y no sabemos en lo que han de venir a parar plegue a Dios y no sea en lo que pararon aquellas de quien dice Nuestro Sentildeor Porque las hijas de Sioacuten se ensoberbecieron (esto es las ciudadanas) cuando saliacutean de sus casas llevaban las gargantas ex-tendidas los ojos altos a una y otra parte guintildeaacutendolos los pasos muy compuestos el Sentildeor las volveraacute calvas y les raeraacute los cabellos de sus cabezas les quitaraacute sus chapines y jerbillas bordadas las medias lunas rodetes las cadenas y collares de oro las ajorcas los tocados costosos los punzones de oro para partir las crenchas los zarcillos y los olores los anillos y piedras preciosas etc y por los olores seles daraacute muy pes-tilencial olor y por las cintas de oro sogas de esparto etc No creo yo hay en lo descubierto del mundo ciudad en su tanto ni cuatro veces mayor que a tanta soberbia en este particular como esta nuestra ciu-dad [Lima] llegue acueacuterdome que los antildeos pasados maacutes ha de treinta y ocho que llegando un religioso nuestro de Espantildea nacido y criado en Toledo a nuestro convento de esta ciudad cerca de la fiesta de Cor-pus Christi tratando de ella y de la suntuosidad majestad y riqueza que aquel diacutea en Toledo en calles y ventanas se mostraba le deciacuteamos que no nos espantase porque en nuestra ciudad veriacutea coacutemo no le ha-

145ESPANtildeOLAS DE ULTRAMAR EN LA HISTORIA Y EN LA LITERATURA

ciacutea mucha ventaja Toledo Llegoacute la fiesta vio la riqueza que se mostroacute en los vestidos de las mujeres adornos de ventanas altares y calles dijo que la riqueza de Toledo en este diacutea mostrada no haciacutea muchas ventajas a la de esta ciudad Pues es cierto que hay tanta diferencia de entonces ahora en lo que vamos tratando como de vestidos de aldea a vestidos de corte con justo tiacutetulo se podriacutea moderar por los virreyes esta soberbia pero no seacute por queacute no se modera y siacute seacute por queacute ni los maridos no tienen aacutenimo para moderarlo ni los gobernadores tampo-co (Lizarraga 38 lib 1 cap 51)

Seriacutea injusto y exagerado afirmar que los descubrimientos transoceaacutenicos se hicieron por la presioacuten que ejercieron las mujeres sobre sus amantes para que estos les trajesen laquomaacutes raacutepidamenteraquo todo ese laquosin finraquo de delicadezas exoacuteticas de todo tipo que existiacutean en el Oriente Lo que siacute es cierto es que las mujeres fueron grandes consumidoras de perfumes afeites sedas joyas y otros bienes suntuarios siendo muy conscientes de lo que hoy entendemos como laquomodaraquo Martiacuten Fernaacutendez de Navarrete en su indispensa-ble trabajo sobre los primeros viajes transoceaacutenicos Coleccioacuten de los viajes y descubrimien-tos menciona de paso la situacioacuten de algunas mujeres durante el siglo XV Es precisa-mente esta eacutepoca en la cual portugueses y castellanos entran en conflicto por el control de algunas posesiones en las costas africanas

y crecioacute el lujo a tal extremo que aun las mujeres de los menestrales y artesanos se confundiacutean en los vestidos con las de alto linaje y esta-do usando ropas de ricas telas de seda de oro de lana con forros de martas y pieles y con guarniciones de oro plata y aljoacutefar cuyo gasto por ser ruina de las familias se tratoacute de corregir aunque sin efecto en las Cortes de Palenzuela (M Fernaacutendez de Navarrete 75 21)

El mismo autor resalta la importancia que tuvo para el comercio de Castilla el contar con una buena armada que protegiese a los barcos de piratas y otros peligros Gracias a los inventarios que se han conservado del duque de Beacutejar y de don Alvaro de Zuacutentildeiga conocemos el lujo de estos sentildeores en perlas orientales piedras preciosas telas y demaacutes utensilios de gran valor134 Existe una Real Pragmaacutetica de Fernando el Catoacutelico a Diego Coloacuten en donde aparece nuevamente la conciencia que se teniacutea sobre la manera de ves-tir que deberiacutean llevar las damas castellanas

R PRAGMAacuteTICA SOBRE EL VESTIR Y GASTAR SEDA EN LAS IN-DIAS Valladolid 12 de noviembre de 1509 Don Fernando etc A vos Don Diego Coloacuten nuestro Almirante y Gobernador de las Indias del mar Oceacuteano y a otro cualquier mi Gobernador etc Sepades que yo he sido informado de los muchos gastos y costas que se han hecho y facen y se esperan hacer si yo no lo mando proveer y remediar en el vestir y gastar de las sedas y brocados y bordados en la Isla Espantildeola y en las otras islas y poblaciones de las dichas islas del mar Oceacuteano tra-yendo en ello mucho desorden y yo por el amor y voluntad que tengo

134 AGI Indiferente 418 Libro 2 fol 87v Publicada en DH Am Tom 6 paacutegina 191 DIA Tomo 31 pag 470 DIU Tomo 5 paacuteg 166 Seguacuten la RC a Diego Coloacuten fechada a 14 de noviembre de 1509 es la pragmaacute-tica que se guarda en Castilla sobre la manera de vestir (DIU Tomo 5 paacutegina 174)

146 JUAN FRANCISCO MAURA

a esas dichas Indias y a los pobladores dellas y porque deseo que ellas se aumenten y acrecienten por las haber ganado y descubierto por la gracia de Nuestro Sentildeor con nuestra industria trabajo y costa y los po-bladores dellas no hagan sobre lo suso dicho tan excesivos gastos sino pues que van a ellas con deseo y voluntad de se ayudar y aprovechar del oro que por gracia de Nuestro Sentildeor se descubre de cada diacutea se detengan en lo gastar en semejantes cosas para se aprovechar dellos en otras cosas que maacutes les convenga asiacute para sus personas como para sus haciendas y por evitar y excusar lo suso dicho mandeacute lo platicar con algunos de mi Consejo y por ellos visto se halloacute que porque nuestros suacutebditos y naturales que viven y estaacuten en dichas Indias no gasten sus haciendas en semejantes desoacuterdenes y que las conserven y guarden pa-ra sus menesteres y por el bien y el pro comuacuten de todos generalmente mando dar esta mi carta premaacutetica sancioacuten la cual quiero y mando que haya fuerza y vigor de ley bien ansiacute y a tan cumplidamente como si fuese fecha y promulgada en Cortes por lo cual ordeno y mando que en cuanto a mi merced y voluntad fuere ninguna ni algunas personas de cualquier ley estado condicioacuten que sean que estuvieren de morada o vivienda o en otra cualquier manera en la dicha Isla Espantildeola y en las otras islas desas dichas Indias y tierra firme no puedan traer y traigan ropa alguna de brocado ni de seda ni de chamelote de seda ni zarzahaacuten ni tercenel ni tafetaacuten ni vainas ni correas de espada ni en cinchas ni en sillas ni en alcorques ni en cosa alguna ni tampoco puedan traer ni trai-gan bordados de seda ni chapado de plata ni de oro de martillo ni fila-do ni tejido ni de otra cualquier manera pero que las personas que tu-vieren en las dichas Indias bienes asiacute muebles como raiacuteces que valgan hasta la cuantiacutea de mil castellanos que ellos y los hijos que tuvieren de hasta edad de catorce antildeos traigan jubones y caperuzas y bolsas y ribe-tes y pestantildeas de seda de cualquier color que quisieren con tanto que en una ropa no traigan maacutes de un ribete y que no haya en los dichos ribetes y pestantildeas maacutes anchura de cuanto un dedo pulgar y que no se traiga en los ruedos de las ropas y que puedan traer becas de tercenel y de tafetaacuten y de papahigos de camino aforrados en el mismo tercenel y tafetaacuten y ansiacute mismo permitimos que puedan traer de seda las cora-zas y guarnecer las faldas y gocetes y capacetes y baberas y quejotes y traer cojines de seda en la silla de la jineta y que las mujeres de las tales personas que tuviesen bienes en la dicha cuantiacutea de los dichos mil castellanos y sus hijas siendo doncellas puedan traer gonetes y corseacutes y fajas de dos varas de largo de seda y [borradas dos letras por mancha de tinta] mas y de lo de vestir y mudar cuando quisieren y por bien tuvieren quier sea moyil o faldilla o cota o haacutebito u otra cualquier ropa con tanto que juntamente no puedan vestir ni vistan maacutes de una ni les pongan trepas ni tiras de seda ni de brocado ni de oro tirado ni tejido ni relido ni en las ropas de pantildeo pongan cortapisas ni lisonjas ni trepas ni tiras ni otra guarnicioacuten alguna de seda ni de brocado salvo que puedan traer un ribete o pestantildea de seda de anchura de un dedo pulgar asiacute en

147ESPANtildeOLAS DE ULTRAMAR EN LA HISTORIA Y EN LA LITERATURA

las ropas de seda como en las de pantildeo en los ruedos de las faldas y para las costuras y no otra cosa alguna y que no traigan la dicha seda en las guarniciones de las mulas ni en angarillas ni en sillas ni en pantildeos ni en otra cosa alguna y que ansiacute mismo no puedan traer mantillas de seda ni enforradas en seda sopena que l que contrario hiciere pierda las ro-pas que ansiacute trujere vestidas por primera vez y sea repartido la mitad para el juez que lo juzgare y la otra mitad para el juez que lo acusare y por la segunda que pierda la ropa y se parta como dicho es y sean desterrados de la isla donde viviere para dos antildeos y por cuanto algu-nas personas de los que nuevamente destos reinos de Castillaa van a se avecindar y poblar y estar en las dichas Indias y son de honra acae-ce que no llevan tantos bienes que valgan la dicha cuantiacutea de los mil castellanos que mando que tengan los que hubieren de traer seda en la manera que dicha es que a eacutestos tales no se entienda y extienda lo suso dicho y que puedan traer la dicha seda seguacuten y en la manera que dicha es y no maacutes hasta tanto que haya un antildeo que estaacuten en las dichas Indias que corra y se cuente desde el diacutea que llegare fasta ser cumplido y que siacute cumplido no tuviere bienes que valgan la dicha cuantiacutea de los dichos mil castellanos que no puedan traer seda ninguna so la dicha pena de suso contenida la cual mando a vos las dichas nuestras justi-cias y a cada una de vos que esta mi carta y todo lo en ella contenido y cada cosa y parte dello guardeacuteis y cumplaacuteis y ejecuteacuteis por manera que se cumpla y ejecute lo en ella contenido so pena de perdimiento de los oficios y que seades inhaacutebiles para haber otros semejantes y que pagueis la estimacioacuten de la tal ropa que dejardes de ejecutar y para que lo susodicho sea notorio y ninguno dello pueda pretender ignorancia mando que esta mi carta sea pregonada puacuteblicamente por las plazas y mercados y otros lugares acostumbrados desas dichas islas por prego-nero y ante escribano puacuteblico(Konetzke Coleccioacuten 23)135

Tambieacuten se sabe de las joyas que Rodrigo Ponce de Leoacuten marqueacutes de Caacutediz debioacute dar a dontildea Beatriz Pacheco (M Fernaacutendez de Navarrete 75 22) Lo que siacute queda claro es que la navegacioacuten seraacute a partir de estos antildeos la forma maacutes raacutepida e importante para comerciar con aquellos paiacuteses de Oriente que antes soacutelo era posible alcanzar a traveacutes de rutas terrestres Existe un documento muy representativo de este periodo sobre la posesioacuten de joyas de gran valor por parte de miembros de una de las familias maacutes repre-sentativas residentes en Ameacuterica Los protagonistas son en este caso el almirante Diego Coloacuten y su mujer Mariacutea de Toledo Dice el documento que El jurado Antoacuten Bernal y Juana de Hoces su mujer vecinos de Sevilla en la collacioacuten de Santa Cruz reciben de Diego Coloacuten Almirante de las Indias laquoun joyel muy rico de oro de hechura de escudo que tiene en medio una piedra preciosa grande esmeralda e debaxo de la dicha piedra un rostro de aacutengel labrado en el mismo oro esmaltado e a cada lado del dicho rostro una piedra preciosa diamante pura y debaxo una piedra gruesa pendiente que pesa el dicho

135 AGI Indiferente 418 Libro 2 fol 87v Publicada en DH Am Tom 6 paacutegina 191 DIA Tomo 31 pag 470 DIU Tomo 5 paacuteg 166 Seguacuten la RC a Diego Coloacuten fechada a 14 de noviembre de 1509 es la pragmaacutetica que se guarda en Castilla sobre la manera de vestir (DIU Tomo 5 paacutegina 174)

148 JUAN FRANCISCO MAURA

joyel con todo lo susodicho medio marcoraquo Los citados Antoacuten Bernal y su esposa se dan por pagados de todo lo que se les adeudaba y se obligan a su vez a devolver el joyel al Almirante si este les paga en dinero El 23 de agosto de 1530 siete antildeos despueacutes la virreina canceloacute la anterior obligacioacuten y recuperoacute el mencionado joyel (AHPS Libro del antildeo 1523 Oficio I Escribaniacutea Alonso de la Barrera Folio 1173 Fecha 3 de diciembre) En la misma casa del almirante otra mujer Briolanga Muntildeiz su tiacutea materna se obliga a pagar al mercader genoveacutes Batista Catantildeo 22 ducados de oro laquopor cierto raso que le comproacute y habiacutea de ser pagado en el puerto de Santo Domingoraquo (AHPS Libro del antildeo 1509 Oficio V Libro uacutenico Escribaniacutea Francisco Esquibel Folio Primer tercio del lega-jo Fecha 9 de marzo) Dontildea Briolanga recibiacutea cada antildeo para su mantenimiento 100000 maravediacutes del almirante mayor de las Indias por medio de Gaspar Gurricio monje del monasterio de Santa Mariacutea de las Cuevas (AHPS Libro 1510 Oficio XV Libro II Es-cribaniacutea Bernal Gonzaacutelez Vallesillo Folio primer tercio del legajo Fecha 4 de julio) Resulta interesante hacer notar la temprana presencia (1516) de un ingleacutes en Santo Domingo involucrado igualmente en la compra de telas Se trata de laquoNicolas Arnoteraquo residente en Santo Domingo que debe pagar a Mariacutea Caldera mujer del comendador Diego Barbosa el valor de una cama de sargas de colores de Flandes (AHPS Libro del antildeo 1516 Oficio XV Libro II Escribaniacutea Bernal Gonzaacutelez Vallesillo Folio Primer tercio del legajo Fecha 28 de agosto) Sin embargo anteriormente a esa fecha (1514) encontramos a un veneciano casado con una inglesa mucho maacutes ceacutelebre en sus viajes trasoceaacutenicos laquoSevastiaacuten Cavotoraquo capitaacuten del rey don Fernando y vecino de Sevilla136

De forma paralela se observa tambieacuten un cierto desenvolvimiento de la mujer en su medio lo que equivaliacutea a intercambios de informacioacuten a todos los niveles incluyendo por lo tanto el cultural No era extrantildeo que tuviesen libros de comedias a mano y que llegasen incluso a escribir comedias ellas mismas Efectivamente la sospecha de que las damas llegasen a escribir comedias estaba bien fundada Veacuteanse algunos ejemplos Ana Caro Malleacuten de Soto una de las maacutes famosas dramaturgas de la Sevilla del siglo XVII autora de El conde de Partinupleacutes utiliza el tema del amor en sus maacutes diversas variantes fiacutesicas y espirituales como el eje de casi todas sus obras (Perry 57) Este hecho por otra parte indica el favor del puacuteblico ante un tema tan popular Veacutease otro ejemplo

The drama of this period did not present love and marriage as a simple partnership however and many dramatists contrasted laquoprofaneraquo with laquohonestraquo love Feliciana Enriacutequez de Guzmaacuten who wrote Tragicome-dia Los jardines y campos sabeos in Seville in the early seventeenth cen-tury presented the hero Clarisel as the victim of laquopervertedraquo and fickle Belidiana in part 1 so blinded by her beauty that he feels himself laquoin shackles and in chainsraquo (Perry 57)

Pero las damas espantildeolas de esta eacutepoca no soacutelo escribiacutean comedias algunas tambieacuten se aventuraron a escribir tratados cientiacuteficos Uno de estos casos fue el de Oliva Sabu-co de Nantes Barrera que a finales del siglo xvi escribioacute un tratado meacutedico sobre la naturaleza humana advirtiendo que la lujuria podiacutea perjudicar al cuerpo Se basaba en

136 Sebastiaacuten Caboto o laquoSevastiaacuten Cavotoraquo estaba casado con Juana Cavoto vecina que fue de la ciudad de Londres en la parroquia de San Gil (AHPS Libro del antildeo 1514 Oficio I Libro II Escribaniacutea Mateo de la Cuadra Folio 253 Fecha 14 de Septiembre) citado en CFAAPS Vol 3 doc 128 p 37

149ESPANtildeOLAS DE ULTRAMAR EN LA HISTORIA Y EN LA LITERATURA

la presuncioacuten de que la lujuria provocaba que el cerebro emitiese un liacutequido que iba al estoacutemago enfriaacutendolo y debilitaacutendolo interrumpiendo de esta manera las funciones vitales (Perry 58)

Se sabe que en la eacutepoca de Isabel la Catoacutelica habiacutea muchas mujeres estudiantes y que la propia reina las impulsaba a estos menesteres iniciativa que obtuvo sus frutos en las deacutecadas siguientes Ademaacutes de las conocidas novelistas Mariacutea de Zayas y Sotomayor y dontildea Mariana de Carvajal existioacute toda una serie de escritoras de todos los geacuteneros lite-rarios que florecieron a ambos lados del Atlaacutentico y que no solamente llaman la aten-cioacuten por su nuacutemero sino por la calidad de sus obras Algunas de ellas como dontildea Luisa de Padilla condesa de Aranda calificada por Serrano y Sanz como laquola maacutes notable de cuantas florecieron en Espantildea en el siglo XVIIraquo personificaraacuten a la perfeccioacuten a este tipo de mujeres Tambieacuten deberiacuteamos saber cuaacutentas seriacutean las mujeres que escribieron con pseudoacutenimos masculinos

La informacioacuten sobre las diferentes facetas de la vida femenil con que contamos no es abundante A pesar de todo podemos hacernos una idea maacutes clara de la verdadera situacioacuten de la mujer a traveacutes de una nueva interpretacioacuten de los textos tanto de los medievales como de las croacutenicas de los primeros antildeos del descubrimiento y conquista Algunos estudios relativamente recientes surgidos por el intereacutes general que suscita todo lo concerniente a la mujer han ayudado a considerar nuevas perspectivas La eru-dicioacuten moderna estaacute poniendo en tela de jucio los estereotipos tradicionales en cuanto a la pasividad y relevancia femeninas asiacute como al tradicional misogenismo que se atri-buye a la eacutepoca medieval Cada vez estaacute maacutes claro que la existencia de estas mujeres variaba considerablemente seguacuten la eacutepoca posicioacuten social o situacioacuten geograacutefica por lo que hacer valoraciones categoacutericas sobre laquola situacioacuten de la mujerraquo puede llevar a graves equivocaciones (Dillard 9) Es fundamental para comprender a la mujer espa-ntildeola que pasoacute al Nuevo Mundo tener en cuenta las enormes diferencias de todo tipo que existieron en la sociedad castellana y novomundista Un pintoresco ejemplo es el de laquolas tapadasraquo una usanza de origen aacuterabe que se pondriacutea de moda en Castilla poco despueacutes de la toma de Granada por los Reyes Catoacutelicos y que despueacutes pasariacutea al Peruacute Esta tradicioacuten ha perdurado en algunos pueblos de Espantildea hasta relativamente poco tiempo pueblos como Mojaacutecar (Almeriacutea) y Vejer de la Frontera (Caacutediz) son ejemplo de esta costumbre tambieacuten conocida como el de las laquocobijaacutesraquo

Tras la caiacuteda del reino musulmaacuten de Granada en 1492 la corona espa-ntildeola prohibioacute a las mujeres aacuterabes de Andaluciacutea vestir los velos islaacutemi-cos que cubriacutean sus rostros y ocultaban su identidad No era faacutecil des-arraigar esta costumbre tan ancestral y secular y el emperador Carlos asiacute como su hijo el rey Felipe II tuvieron que repetir la prohibicioacuten Cuando finalmente las moras fueron obligadas a abandonar sus velos y a adoptar el chal castellano comenzaron a utilizar la nueva prenda para cubrir sus rostros dejando al descubierto soacutelo uno de los ojos Esta nueva moda en el uso del chal tradicional nos asegura leoacuten Pi-nelo era extremadamente graciosa sensual y atractiva a causa de la belleza exoacutetica de los ojos de las moras Las mujeres cristianas de Granada Coacuterdoba y Sevilla imitaron pronto la nueva moda de llevar el chal y asiacute nacioacute la laquotapadaraquo hispana Desde Sevilla la nueva moda

150 JUAN FRANCISCO MAURA

fue a las colonias de ultramar y tomoacute raices especialmente en el Peruacute (Martiacuten 317-18)

En un reciente estudio sobre la educacioacuten de la mujer en la Ameacuterica virreinal apare-cen algunos ejemplos significativos de mujeres espantildeolas que consagraron gran parte de sus vidas a la tarea docente Dentro del proceso educativo de las espantildeolas que fueron a las Indias destaca el papel de dontildea Catalina de Bustamante Joseacute de Jesuacutes Vega y Ma-riacutea Luisa Caacuterdenas de Vega dicen en su obra Ameacuterica Virreinal La Educacioacuten de la mujer que esta mujer pocos antildeos despueacutes del descubrimiento del Nuevo Mundo se dedicoacute a trabajar en favor de los indios aunque por desgracia su nombre y sus hechos en la labor docente hayan sido ignorados por los historiadores modernos (Vega 12-13)

Son varias las veces que se nombra a Catalina de Bustamante en el citado estudio y varias las fuentes antiguas en que se recoge la presencia de tan distinguida laquomatrona muy honrada y de buen ejemploraquo de la que ya hablaba Zumaacuterraga y sobre la que se hizo un informe enviado a Carlos V describiendo sus actividades en la Nueva Espantildea firmado por cuatro de los misioneros maacutes conocidos de Meacutexico

El informe dice que los franciscanos de Texcoco acababan de cons-truir un nuevo monasterio y cedido el antiguo A una honrada y honesta y muy virtuosa matrona que se dice Catalina de Bustamante para que ende instruyese a las hijas de los sentildeores de la comarcala cual con el favor de Dios y limosnas que don Hernando [Corteacutes] les haciacutea para su sustentacioacuten [teniacutea en esa casa-hogar] hasta trescientas mujeres antes maacutes que menos (Vega 14)

Estas laquocasas-hogarraquo no estaban regentadas necesariamente por monjas sino por lo que llamaban laquobeatasraquo mujeres que sin estar estar sujetas a la autoridad eclesiaacutestica se dedicaban a un laquolucro honestoraquo Llamadas tambieacuten laquobeateriosraquo eran diferentes a los conventos de monjas y constituiacutean las primeras escuelas de la mujer en la Nueva Espa-ntildea (Vega 20-21) Fue gracias al ejemplo de mujeres como Catalina de Bustamante que dedicaron sus vidas a la educacioacuten de los indiacutegenas que existiesen otras continuando su ejemplo Motoliniacutea dice claramente que laquode ese primer encerramiento (el de Texcoco regentado por Catalina) salieron otras honestas y muy virtuosas duentildeas que ensentildeaban a las maacutes menudasraquo (Vega 23)

Pero dontildea Catalina de Bustamante pese a ser una singular mujer y la iniciadora de la educacioacuten de la mujer en Meacutexico no fue un caso aislado corresponde maacutes bien a un patroacuten al que se ajustaron muchas de las pioneras de la Nueva Espantildea que sembraron instituciones de educacioacuten de la mujer En 1530 unos antildeos maacutes tarde aparecioacute una de las grandes protectoras de la instruccioacuten femenina en Ameacuterica La emperatriz Isabel de Portugal (Vega 24)

Desde comienzos de la conquista fueron varios los centros docentes regentados por mujeres en los que la ensentildeanza no estaba impartida por monjas Una de las institucio-nes maacutes sobresalientes del sistema educativo fue el Colegio de Nintildeas que se establecioacute en la ciudad de Meacutexico a principios del siglo XVI con maestras que no eran monjas Estas seglares conocidas comunmente como laquomigasraquo eran las descendientes de las antiguas beatas Su ubicacioacuten permanente fue determinada en 1548 lugar que serviriacutea de escue-la ininterrumpidamente hasta 1862 cuando el edificio fue convertido en bodega (Vega 60) No se debe perder de vista que no soacutelo por el hecho de llevar una vida secular se

151ESPANtildeOLAS DE ULTRAMAR EN LA HISTORIA Y EN LA LITERATURA

gozaba de maacutes privilegios Era maacutes bien al contrario En las carreteras las mujeres segla-res no inspiraban el mismo respeto que las monjas que ademaacutes teniacutean contacto cons-tante con personas de los dos sexos no pertenecientes a la Iglesia (Arenal 297) Ademaacutes dentro de las murallas del convento desapareciacutean muchas de las barreras sociales que limitaban a la mujer de esta eacutepoca

La presencia femenina y la monarquiacutea

Pues iquestcoacutemo sabes tuacute preguntoacute don Quijote que los grandes llevan detraacutes de siacute a sus caballerizos Yo seacute lo direacute respondioacute Sancho Los antildeos pasados es-tuve un mes en la corte y alliacute vi que paseaacutendose un se-ntildeor muy pequentildeo que deciacutean que era muy grande un hombre le seguiacutea a caballo a todas las vueltas que daba que no pareciacutea que era su rabo Pregunteacute que coacutemo aquel hombre no se juntaba con el otro sino que siempre anda-ba tras deacutel Respondieacuterome que era su caballerizo y que era uso de grandes llevar tras siacute a los tales Desde enton-ces lo seacute tan bien que nunca se me ha olvidado (Cervan-tes Don Quijote)

Los monarcas espantildeoles fueron conscientes de que sin la presencia femenina difiacute-cilmente se podriacutea solidificar una conquista a todos los niveles La mayor parte de los virreyes y altos cargos trajeron a sus mujeres con ellos y en las ciudades principales de Hispano-Ameacuterica como la ciudad de Meacutexico Guatemala Lima o Potosiacute habiacutea mujeres que disfrutaban de una esmerada educacioacuten (gramaacutetica latiacuten poesiacutea historia muacutesica) Esto dariacutea origen a una elegante y hasta cierto punto sofisticada sociedad en la que las mujeres tomaron parte en asuntos maacutes importantes que los que sus homoacutelogas toma-ran en las colonias portuguesas laquoThere were brilliant vice-regal courts at Mexico City and Lima far exceeding anything that could be found in Portuguese or English America during the seventeenth centuryraquo (Boxer 39) Las estadiacutesticas con las que contamos hoy no soacutelo demuestran que las mujeres llegaron al Nuevo Mundo en respetables porcen-tajes sino que ademaacutes tuvieron una participacioacuten activa llegando a intervenir en algu-nos casos en las liacuteneas de vanguardia Resulta difiacutecil aproximarse al estado de aacutenimo de aquellas mujeres que vivieron en eacutepocas tan lejanas Para ello es necesario indagar en los documentos de la eacutepoca para lograr rescatar del pasado todos esos tesoros de la historia muchas veces tergiversados y manipulados con el fin de que sirvan a propoacutesi-tos actuales Es en los viejos manuscritos donde queda testimoniada su presencia tan rica en dolores tragedias y por queacute no en amores Fue la llegada de estas mujeres una brisa de esperanza y de ilusioacuten para aquellos que ya estaban en las tierras de ultramar y

152 JUAN FRANCISCO MAURA

veiacutean venir de su propia tierra aquello que maacutes antildeoraban amantes madres hermanas Un haacutelito de vida y poesiacutea que suavizaba las costumbres de estos rudos y romaacutenticos pioneros laquoporque para ser hombres de tales empresas algo de romaacutentico debioacute de existir en ellos y que es tan propio del espantildeol y abandonariacutean en brazos tan gentiles sus bruscos modales que habiacutean adquirido en aacutespero contacto en selvas y montantildeasraquo (Villafantildee 125)

Hoy sabemos que en la normativa oficial de la Espantildea del siglo XVI y XVII se favoreciacutea el paso de mujeres al Nuevo Mundo Afirmar lo contrario no solamente es falso sino que implica un desconocimiento total de los primeros dos siglos de la colonizacioacuten espantildeola La presencia de estas mujeres espantildeolas fue efectiva laquolas disposiciones al respecto demuestran claramente que se teniacutea especial intereacutes en su arraigo y que se tra-taba de defender su posicioacuten de mujeres casadas con conquistadores y colonizadoresraquo (Villafantildee 126) Los monarcas comprendiacutean que era praacutecticamente imposible que los hombres viviesen sin mujeres y que de ser asiacute era de esperar que se cometiesen abusos con las indias lo que incidiriacutea en la moral social y en el buen gobierno de la colonia Ademaacutes sin un asentamiento definitivo con hogares y familias difiacutecilmente se podriacutea llevar a cabo una presencia permanente en las nuevas colonias (Orsquo Sullivan-Beare 45)

Empezando por los Reyes Catoacutelicos la preocupacioacuten de que en las colonias se esta-bleciesen nuacutecleos que tuviesen como base la familia cristiana fue clara Las capitulacio-nes que a este efecto se hicieron entre los conquistadores y la Corona fueron nume-rosas La efectuada entre Rodrigo de Baacutestidas y Carlos V puede ser un buen ejemplo Fechada en Valladolid el 6 de noviembre de 1524 muestra el propoacutesito de Baacutestidas de establecer una colonia permanente en la desembocadura del riacuteo Magdalena en el terri-torio que hoy vendriacutea a corresponder a Colombia El documento firmado por el Empe-rador comienza asiacute

El Rey Por cuanto por parte de vos Rodrigo de Baacutestidas vecino de la ciudad de Santo Domingo de la Isla Espantildeola Me fueacute fecha relacioacuten que por servicio de la Catholica Reyna Mi Sentildeora e Nuestro os ofre-ceacuteis de poblar e poblariades la provincia e puerto de Santa Marta que en Castilla de Oro llamada la Tierra Firme e que la poblariades dentro de dos antildeos siguientes haciendo en ella un pueblo en que no menos haya en eacutel al presente cincuenta vezinos que los quince de ellos sean casados y tengan consigo a sus mujeres y que lo teniades fecho dentro de dos antildeos y de hoy en adelante lo maacutes que fuese posible asiacute de cris-tianos espantildeoles como de indios (Restrepo 1 30)

De igual manera el priacutencipe Felipe (futuro Felipe II) en las capitulaciones establecidas en 1547 con Juan de Sanabria para que eacuteste fuese como gobernador y capitaacuten general de la dicha provincia escribe lo siguiente laquoPrimeramente que seais obligado e os obligeis a llevar destos Reynos de Castilla a la dicha provincia del Rio de la Plata cien casados con sus mujeres e hijos para poblar la dicha provincia y con ellos llevareis a vuestra muger e hijos (CDI de Ameacuterica y Oceaniacutea 23 119)

En numerosas ocasiones se pone de manifiesto el apoyo de la monarquiacutea a la emigra-cioacuten femenina tantas que difiacutecilmente se podriacutean enumerar todos los casos Lo cierto es que la legislatura vigente favoreciacutea la emigracioacuten y traslado de mujeres con toda una se-

153ESPANtildeOLAS DE ULTRAMAR EN LA HISTORIA Y EN LA LITERATURA

rie de alicientes137 sobre todo si eacutestas estaban casadas pasaje para llevar a las familias franquicia de derecho para los artiacuteculos que portasen consigo favoritismo en cargos destinos y contrataciones a aquellos que pasasen con sus mujeres incluyendo ademaacutes de los castellanos y leoneses a suacutebditos de otras partes de la corona incluso genoveses y portugueses si estos veniacutean acompantildeados de sus consortes (Fernaacutendez Duro 15-16)

Incluso se llegoacute a imponer penas a aquellos hombres casados que no llevasen a sus mujeres con ellos a Indias en el teacutermino de un antildeo El mismo emperador en una ceacutedula otorgada al virrey de la Nueva Espantildea le recomendaba que laquoprocurase persuadir a ca-sarse a los solteros que estuviesen en edad y situacioacuten de hacerloraquo prometieacutendoles que al efectuar el matrimonio seriacutean preferidos en el reparto de indios En la isla de San Juan de Puerto Rico los cargos oficiales y oficios puacuteblicos debiacutean de ser desempentildeados por los casados en primer lugar En Meacutexico ocurrioacute lo mismo con los cargos de corregido-res (Konetzke laquoemigracioacutenraquo 140-41) Felipe II al igual que sus antecesores y sucesores reiteraraacute y justificaraacute los beneficios de los que seraacuten acreedores aquellos que tengan allaacute a sus mujeres laquoque los que han servido en los descubrimientos de las dichas Indias y tambieacuten los que ayudan a la poblacioacuten dellas que tienen allaacute sus mugeres sean preferi-dos en los aprouechamientos qualesquierraquo mandando que despueacutes de los conquistado-res se tuviera en cuenta para la laquoprovisioacuten de los corregimientosraquo a los colonos casados siempre que estuvieran capacitados para dichos cargos (Konetzke laquoemigracioacutenraquo 141)

Las disposiciones en favor del matrimonio son claras ya sea por medio de un favo-ritismo manifiesto como en los casos antes citados o mediante medidas de cohercioacuten para que esta poliacutetica se llevase a cabo Don Sebastiaacuten Ramiacuterez de Fuenleal obispo de Santo Domingo y presidente de la Audiencia de Meacutexico propuso que a aquellos enco-menderos que no estuviesen casados y que no hubiesen tomado parte en la conquista se les quitase los indios concedidos con la obligacioacuten de devolveacuterselos si en el plazo de un antildeo habiacutean contraiacutedo matrimonio (Konetzke laquoemigracioacutenraquo 142-43) Por supuesto hubo excepciones a estas reglas En algunos casos ni la mujer teniacutea especial intereacutes en vivir junto con su marido en las Ameacutericas ni el marido queriacutea ir a buscar a su mujer pasado el plazo de un antildeo En el presente documento y de forma excepcional las auto-ridades reales protegen a los conyuges para que puedan seguir viviendo separados en continentes diferentes

Nuestras justicias de la ysla de Cubagua e otras qualesquier de las nuestras Yndias yslas e tierra firme del mar oceacuteano e a cada uno e qualquier de vos a quieacuten esta mi ceacutedula fuese mostrada por parte de Alonso de Tapia nuestro veedor de la provincia de Paria me ha sido hecha relacioacuten que ha mucho tiempo que reside en esas partes donde nos ha servido en lo que se ha ofrecido e que agora vos otros le apre-miaacuteis a que venga o embiacutee a estos Reinos por su muger lo cual no puede al presente hazer a causa de no ter posibilidad para ello a mi me ha suplicado vos mandase que no le compeliacuteesedes ny apremiaacutesedes a que viniese o enviase por la dicha su muger y dieacutesedes por libres los fiadores que tenyades para que dentro de un antildeo embiariacutea o verniacutea por

137 Reales Ceacutedulas de los antildeos 1502 y 1503 Academia de la Historia Coleccioacuten Muntildeoz tomo 75 fols 209 y 220 citado por Fernaacutendez Duro 15

154 JUAN FRANCISCO MAURA

ella o como la mi merced fuese lo cual visto por los de nuestro consejo juntamente con una peticioacuten presentada por dontildea Mariacutea Gudiel muger del dicho Alonso de Tapia por la cual nos suplica lo mismo que acor-dado que debiacutea mandar esta mi ceacutedula para vos por la qual vos mando que no compelaacuteis ni apremieacuteis al dicho Alonso de Tapia a que venga ni enviacutee a estos reinos por la dicha su muger si no fuere a que la pro-vea de lo que fuere necesario para su mantenimiento y deys por libres quales quier fianzas que sobre ello haya dado e no fagades ende al por alguna manera Firmado en la villa de Valladolid a VII diacuteas del mes de febrero de mil e quinientos e treinta y siete antildeos yo el licenciado Con-de de Samano y sentildealada del cardenal Beltraacuten y Carbajal [Aparte en letra pequentildea] Este diacutea se despachoacute una provisioacuten por la cuaacutel su Mag hizo merced a Alonso de Tapia de la veedoriacutea de la provincia de Paria por muerte de Garciacutea de Aguilar con las clausulas ordinarias y con el mismo salario que teniacutea Aguilar Firmado del emperador y de Beltraacuten y Bernal y Velaacutezquez El Rey (Registro de disposiciones Riacuteo Marantildeoacuten AGI Indiferente General Legajo 416 libro 2 Fols 94v y 95r)

El punto maacutes interesante a destacar de todas estas disposiciones oficiales en cuanto a la emigracioacuten femenina al Nuevo Mundo no es otro que la libertad que se da a la mujer de decidir si quiere o no casada o sin casar trasladarse al nuevo continente no como una imposicioacuten sino como un precepto laquoel espiacuteritu de las disposiciones en el sentido de asegurar la vida marital de los casados significa que la mujer que su marido invita a pa-sar a las Indias puede negarseraquo (Villafantildee 127) Habriacutea que ver las opciones laquorealesraquo ade-maacutes de las legales y econoacutemicas que le quedaban a la mujer si tomaba esta decisioacuten

El saber la libertad de eleccioacuten que estas mujeres teniacutean de antemano antes de aden-trarse en las interminables penalidades y aventuras que los viajes de la navegacioacuten tran-soceaacutenica suponiacutean hace que sus hechos y esfuerzos cobren auacuten maacutes relieve En nume-rosas ocasiones estas mujeres cruzaron el oceacuteano una y maacutes veces sin otro motivo que el de defender los derechos e intereses de los suyos Lo que resulta maacutes valioso de todo esto es que lo hicieran por propia iniciativa arriesgando sus vidas para que se hiciese justicia y para que no les faltase lo necesario a aquellos que estaban en la otra orilla Las autoridades vigentes conocedoras de los vaciacuteos legales existentes en las nuevas colo-nias se apresuraron a poner en vigor aquellas normas que redundaran en el beneficio de los menos favorecidos por las circunstancias La institucioacuten del matrimonio cuya trans-cendencia es fundamental en la vida juriacutedica y social de la mujer tuvo que ser legislada en Ameacuterica con una serie de nuevas disposiciones agregados modificaciones y aclara-ciones Asiacute pues la legislacioacuten de base espantildeola tuvo que sufrir en tierras americanas esta serie de cambios por motivos poliacuteticos y sociales (Villafantildee 126)

Para hacer un sumario de lo dispuesto hasta el siglo XVI en cuanto a la legislacioacuten de las mujeres que teniacutean familia o intereses en Indias merece la pena mencionar que existieron una serie de disposiciones que protegiacutean a las mujeres para que eacutestas no se viesen abandonadas por sus maridos En un epiacutegrafe de la Recopilacioacuten de 1680 (libro VII tiacutetulo 3) se deja ver claramente la preocupacioacuten de las autoridades en este asunto laquoDe los casados en Espantildea e Indias que estaacuten ausentes de sus mujeres y esposasraquo (Vi-llafantildee 126-27)

155ESPANtildeOLAS DE ULTRAMAR EN LA HISTORIA Y EN LA LITERATURA

La lista de disposiciones se hace interminable En los reinados de Fernando el Catoacute-lico Carlos V Felipe II Felipe III o incluso Carlos II la insistencia es constante La ra-zoacuten de esta insistencia seriacutea bastante obvia dado que con un oceacuteano por medio seriacutean muchos los que se aprovechasen de llevar una doble vida marital sin el estricto control y vigilancia de sus mujeres que se encontraban en la peniacutensula La ley XXVII libro IX tiacutetulo XXVI determina laquoDeclaramos por personas prohibidas para embarcarse y pasar a las Indias todos los casados y desposados en estos reinos lsquosino llevaren con ellos sus mujeresrsquo aunque sean virreyes oidores gobernadores o nos fuesen a servir en cual-quier cargo y oficios de Guerra Justicia y Hacienda porque es nuestra voluntad que todos los susodichos lleven a sus mujeresraquo (Villafantildee 127) laquoLos eclesiaacutesticos eran los en-cargados de dar cuenta a los tribunales competentes de aquellos que estando casados permaneciacutean en Indias sin sus mujeres Son reiteradas las disposiciones de Fernando el Catoacutelico en este sentidoraquo138 En 1514 el rey don Fernando ordena en una provisioacuten para la isla Espantildeola laquodoy licencia eacute facultad aacute cualquier persona naturales de estos Reynos para libremente se puedan casar con mujeres naturales de esa dicha ysla sin tener que incurrir por ello en pena algunaraquo (Villafantildee 129)

No se debe olvidar tampoco a aquellas mujeres que decidieron pasar a las laquonuevas tierrasraquo solteras Estas mujeres tambieacuten tuvieron un papel importante en el desarrollo de las nuevas colonias Los organismos espantildeoles del momento como los mandatarios indianos y todos los cronistas no dejaron pasar desapercibida la importancia social de estas mujeres en la poliacutetica de poblamiento laquo[E]s cierto que los pueblos de Indias nuevamente poblados no se tienen por fijos o estables ni permanentes hasta tanto que mujeres espantildeolas entren en ellos y los encomenderos y conquistadores se casen por muchas causas y respetos buenos y saludables que para ello hayraquo (Villafantildee 126-27)

Si la intencioacuten era la de una presencia permanente en las tierras americanas la mujer soltera que pasase a ellas siempre seriacutea un motivo maacutes para el colono o conquistador de continuar en el mismo suelo Se podriacutea empezar una familia si asiacute se quisiese sin tener que pensar en volver a la metroacutepoli ya fuese a disfrutar de los bienes adquiridos o a laquobuscarraquo una esposa El problema aparecioacute cuando se produjo un exceso de mujeres solteras lo que de alguna manera alteroacute la estructura social existente ya que no habiacutea muchas opciones para ellas aparte del matrimonio o el convento

En consideracioacuten a que la experiencia habiacutea demostrado que un exce-sivo nuacutemero de mujeres ejerciacutea perniciosa influencia sobre la moral y las costumbres se suplicaba al rey no otorgase a aquellas tantas auto-rizaciones para emigrar al Peruacute La ciudad de la Plata fundada en 1538 emite en 1577 un informe en el que se expone la urgente necesidad de que se funde un convento de monjas pues en el territorio de las Au-diencias de Los Charcas existiacutea un gran nuacutemero de muchachas que no pudieacutendose casar se hallaban en gran peligro de perderse (Konetzke laquoemigracioacutenraquo 149)

138 Solorzano Pereira Juan de Libro Primero de la Recopilacioacuten de las Ceacutedulas Reales Cartas y Provisiones y Or-denanzas Reales Noticia preliminar de Ricardo Levenne Universidad de Buenos Aires Facultad de Derecho Y Ciencias Sociales Pub del Instituto de Historia del Derecho Argentino Coleccioacuten de Textos y Documentos para la Historia del Derecho Argentino t V Buenos Aires Imp de la Universidad de Buenos Aires 1945 (Li-bro I Ley 10 laquoQue los Espantildeoles puedan casar con Indias y al contrario a su voluntadraquo t2 p 138 citado en Villafantildee 129

156 JUAN FRANCISCO MAURA

Entristece ver coacutemo se manejan las cifras de estas mujeres como si de ganado o de bienes suntuarios se tratase Por otra parte existieron irregularidades como la de pobla-doras espantildeolas que vivieron amancebadas con hombres que ya estaban casados en la peniacutensula Normalmente esto ocurriacutea cuando la estancia del conquistador se prolonga-ba maacutes de lo debido en lugares donde habiacutea pocas espantildeolas Muchas veces nacieron hijos de estas uniones que hicieron auacuten maacutes difiacutecil la situacioacuten para las mujeres que esperaban en Espantildea a un marido que ya no teniacutea ningunas intenciones de volver En los juicios de residencia los documentos acostumbran a citar estos casos ya que era parte de su obligacioacuten castigar las irregularidades extramatrimoniales y salvaguardar las buenas costumbres familiares que con tanto intereacutes se deseaba mantener laquoUn ejemplo nos lo da la isla de Cuba donde en 1532 viven con hombres casados Olalla Hernaacuten-dez Santillana Aranda lsquola Cordobesarsquo Catalina de Leoacuten Catalina Saacutenchez Francisca Hernaacutendez Mayor de Azebedo Juana de Valeros y lsquouna mujer que estaba en casa de Ayalarsquoraquo (Borges 416)

Estos casos no fueron aislados y mucho menos en Cuba centro neuraacutelgico de todo el movimiento de ida y vuelta entre la metroacutepoli y el Nuevo Mundo Estas ocho acusa-ciones por lo tanto no tienen porqueacute considerarse extraordinarias y menos en el lugar maacutes cosmopolita de las Indias en esos momentos al que llegaban flotas a cada momen-to Al parecer existieron casos parecidos en el Riacuteo de la Plata Peruacute y Nueva Espantildea (Ratcliffe 347) El margen legal para que estas mujeres viviesen como quisiesen estuvo limitado por una moral que veiacutea uacutenicamente en el matrimonio o el convento una salida laquovaacutelidaraquo para que fueran aceptadas socialmente Los hombres en iguales circunstan-cias fueron juzgados por una laquomoralraquo mucho maacutes permisiva

La mujer y el cuerpo eclesiaacutestico

Pues iquestquieacuten diablos os traiacutedo aquiacute dijo don Quijote siendo hombre de la iglesia iquestQuieacuten sentildeor replicoacute el caiacutedo laquomi desventuraraquo Pues otra mayor os amenaza dijo don Quijote sino me satisfaceacuteis a todo cuanto primero os pregunteacute (Cervantes Don Quijote )

Otro factor a tener en cuenta en un anaacutelisis sobre la presencia de la mujer en el Nuevo Mundo es el que tiene que ver con la institucioacuten maacutes importante de las que llegaron desde Europa la iglesia catoacutelica Sin aacutenimo de criticar a tan compleja institucioacuten res-ponsable de gran parte de los aconteceres en el Nuevo Mundo vale la pena analizar algunas singularidades Muchos de sus miembros fueron grandes ejemplos de valor e inteligencia a la hora de tratar los maacutes variados y escabrosos asuntos con los que se encontraron los cristianos en la otra orilla durante este periacuteodo Se debe resaltar tam-

157ESPANtildeOLAS DE ULTRAMAR EN LA HISTORIA Y EN LA LITERATURA

bieacuten su caraacutecter medieval en la manera de hacer apostolado y de entender y tratar a los potenciales cristianos Si se tienen en cuenta los privilegios y prerrogativas que algunas de las altas jerarquiacuteas eclesiaacutesticas tuvieron no seriacutea superfluo estimar que un respeta-ble porcentaje de la poblacioacuten de origen laquodudosoraquo muy bien podiacutea venir de la misma iglesia Fueron muchas las viacutectimas y muchas las familias divididas por un padre laquoinvi-sibleraquo Gran parte de los hijos o laquosobrinosraquo de estos sacerdotes pasaron a ocupar cargos similares incluyendo los privilegios que estos cargos llevaban consigo como si se trata-se de cualquier otro oficio gremial transmitido generacionalmente regla tan comuacuten en la Europa medieval Todaviacutea a finales del siglo XIII en Espantildea los derechos de los hijos y nietos de los sacerdotes estaban protegidos por la ley sin que hubiesen podido ser erradicados por las reformas gregorianas (Ratcliffe 347)139

Las letras espantildeolas ya se haciacutean eco de estos lances amorosos entre representantes de la Iglesia y ciertas damas del lugar desde los tiempos del poeta riojano Gonzalo de Berceo En su obra maacutes conocida Los milagros de Nuestra Sentildeora Berceo describe con un realismo ingenuo y sencillo relatos de humor y de humanismo sobre aquellos hombres de carne y hueso que eran perdonados por la intercesioacuten de la Virgen Mariacutea Juan Ruiz por su lado haraacute de su Libro de buen amor la obra maacutes representativa en este sentido Seriacutea prolijo recordar la actuacioacuten de la Iglesia durante diversos periacuteodos de la Edad Media no soacutelo en Espantildea sino en toda Europa En la Espantildea musulmana del siglo XII concretamente en Sevilla el comportamiento de los representantes de la iglesia cristia-na (mozaacuterabe) en territorio islaacutemico es duramente criticado por el sevillano Ibn Abdun Este precioso documento muestra el estricto control y falta de confianza que existiacutea sobre la mujer prohibieacutendolas que entrasen en las laquoabominablesraquo iglesias cristianas

porque los cleacuterigos [cristianos] son libertinos fornicadores y sodomi-tas Asimismo debe prohibirse a las mujeres francas que entren en la iglesia maacutes que en diacuteas de funcioacuten o fiesta porque alliacute comen beben y fornican con los cleacuterigos y no hay uno de ellos que no tenga dos o maacutes de estas mujeres con que acostarse Han tomado esta costumbre por haber declarado iliacutecito lo liacutecito y viceversa Convendriacutea pues mandar a los cleacuterigos que se casasen como ocurre en Oriente y que si quie-ren lo hagan (Leacutevi-Provenccedilal 150)

Pese a existir una convivencia paciacutefica durante gran parte de la Edad Media entre los tres credos monoteiacutestas de Espantildea (cristianos musulmanes y judiacuteos) esto no suponiacutea que no existiese desprecio y desconfianza entre estos grupos religiosos Dice Abdun resaltando el peligro que suponiacutea que una mujer entrase en casa de un cleacuterigo cristiano de vida ceacutelibe

No debe tolerarse que haya mujer sea vieja o no en casa de un cleacuterigo mientras eacuteste rehuacutese casarse Obliacutegueseles ademaacutes a circuncidarse co-mo les obligoacute al-Mutadid pues si a lo que dicen siguen el ejemplo de Jesuacutes (iexclDios les bendiga y salve) Jesuacutes se circuncidoacute y precisamente ellos que han abandonado esta praacutectica tienen una fiesta que celebran solemnemente el diacutea de su circuncisioacuten (Leacutevi-Provenccedilal 150-151)

139 Valdriacutea la pena ver si han cambiado mucho las cosas desde hace quinientos antildeos a esta parte o si in-cluso la iglesia moderna ha retrocedido en tolerancia en cuanto a las relaciones sexuales de los representantes de la Iglesia

158 JUAN FRANCISCO MAURA

El historiador argentino Germaacuten Arciniegas recoge un pasaje ilustrativo de lo men-cionado anteriormente pero trasladado al ambiente de la colonia diciendo que incluso en poblaciones pequentildeas como Santa Fe con poco maacutes de un convento y una ermita la fragilidad de la carne enredaba a frailes soldados y virreyes por igual laquoEl buen So-liacutes que murioacute en olor de santidad con la cabeza reclinada sobre un par de ladrillos y en saya de franciscano cruzaba en las noches el solar de su palacio para ir a besar a la Marichuelaraquo (118-19)

Arciniegas recoge tambieacuten un suceso aparecido en el diario de Lima en 1667 que no tuvo que ser extraordinario durante los primeros antildeos de la colonia laquoEl fraile carmelita mdashGrande hereje y siendo sacerdote deciacutea misa gran perro lujurioso deshonesto que relatando sus maldades dijo que en cierta ciudad habiacutea conocido carnalmente a maacutes de trescientas y sesenta mujeres y en un convento de monjas habiacutea cometido muchos sacrilegios Este lo trujeron preso de Buenos Aires por Chileraquo (119)

Las controversias de la iglesia moderna sobre las relaciones que los eclesiaacutesticos de-ben tener con el sexo femenino parece que no han encontrado todaviacutea respuesta Sigue existiendo miedo y recelo a que la mujer comparta no soacutelo poder en la jerarquiacutea de la iglesiacutea sino en la vida privada de los miembros de la institucioacuten En la Nueva Espantildea el primer obispo de Meacutexico Juan de Zumaacuterraga viendo en la mujer un ser de tentacioacuten irresistible prohibioacute terminantemente la presencia de eacutestas en su casa Ni siquiera para su limpieza y aseo El franciscano Juan de Torquemada se refiere a este comportamien-to como una de las virtudes del popular obispo

Fue este benditiacutesimo prelado muy amigo de la virtud y de virtuosos y aceacuterrimo reprehendedor de vicios y viciosos y tan enemigo de la ociosidad que no permitiriacutea que alguno de su casa estuviese ocioso fue amiciacutesimo de la limpieza por lo cual jamaacutes consintioacute que mujer alguna entrase en su casa aunque fuese necesaria al servicio de ella ni nunca consintioacute que por alguna ocasioacuten subiese mujer a lo alto y aposentos de ella antes lo teniacutea todo cerrado como un monasterio porque sabiacutea (como quien tambieacuten sabiacutea) que la ocasioacuten suele derribar los maacutes fuertes y robustos corazones (450 lib 20 cap 31)

No fueron uacutenicamente miembros de la iglesia catoacutelica los que valoraron la lucha con-tra la tentacioacuten siguiendo al pie de la letra el crudeliacutesimo refraacuten laquoentre santa y santo pared de cal y cantoraquo Se tienen algunas noticias de la vida social de los primeros tiem-pos de la colonia En estos documentos se puede observar coacutemo no distaban mucho las oacuterdenes que se dictaban en la metroacutepoli y las que se llevaban a cabo en la Nueva Espantildea La vida social tanto de damas como de algunos miembros de la iglesia de las colonias era maacutes laquorelajadaraquo de lo que las normas permitiacutean Gracias a la informacioacuten ofrecida por Manuel Romero de Terreros disponemos de los nombres de las primeras virreinas

Las esposas de los primeros cinco Virreyes Don Antonio de Mendoza Don Luis de Velasco Don Gastoacuten de Peralta Don Martiacuten Enriacutequez de Almanza y Don Lorenzo Suaacuterez de Mendoza Conde de la Coruntildea fueron respectivamente Dontildea Caterina de Vargas Dontildea Ana de Cas-tilla y Mendoza hija de Don Diego de Castilla Sentildeor de Gor y Caba-

159ESPANtildeOLAS DE ULTRAMAR EN LA HISTORIA Y EN LA LITERATURA

llerizo de Carlos V Dontildea Leonor de Vieo Dontildea Mariacutea Manrique hija del Marqueacutes de Aguilar y Dontildea Catalina de la Cerda hija del segundo Duque de Medinaceli (Romero 2)

Existen noticias concretas de la seacuteptima virreina de la Nueva Espantildea (1586) dontildea Blanca de Velasco marquesa de Villamanrique En ellas destaca lo anteriormente men-cionado sobre la falta de tolerancia existente en aquellos tiempos difiacutecilmente com-prensible si no fuera por fragmentos esporaacutedicos conservados sobre la vida colonial en la Nueva Espantildea En la siguiente Relacioacuten hecha por autores anoacutenimos sobre la visita que hizo Fray Alonso Ponce Comisario General de la Orden Seraacutefica a las provincias de la Nueva Espantildea se mencionan las eneacutergicas medidas que con los miembros de su orden en su opinioacuten de moral laquomuy relajadaraquo tomoacute este religioso Tambieacuten aparecen mencionadas sus relaciones con la Virreina

Captoacutese ademaacutes la enemistad del gobernante y de la Virreina Dontildea Blanca de Velasco hija del cuarto Conde de Nieva sentildeora seguacuten pare-ce de conducta ligera y caraacutecter maacutes que dominante laquoPor este mismo tiempo (septiembre de 1586) fueron el Virey y la Vireyna a holgarse y recrearse en la cibdad de Xochimilco Posoacute con toda su casa dentro de nuestro convento en un dormitorio deacutel y detuacutevose alliacute siete u ocho diacuteas en que los indios les hicieron grandes fiestas aunque les costaron caras porque en una dellas murieron dos o tres dellos con un tiro que se disparoacute y reventoacute y al principal indio de aquella cibdad hirieron muy malraquo (Romero 3-4)

A pesar del riacutegido control eclesiaacutestico y civil que habiacutea en la Nueva Espantildea existieron tambieacuten pareacutentesis en los que incluso miembros de la iglesia y mujeres mdashhumanos al fin y al cabomdash pudieron disfrutar de algunos momentos de regocijo y alegriacutea Con-tinuando con la cita anterior el mismo autor se queja del laquoexcesoraquo de libertad en los frailes que se suponiacutea que teniacutean que profesar una extremada pobreza y no digamos castidad En primer lugar se describen pormenorizadamente la abundancia en el tipo y cantidad de comida de toda clase dulces y vino que se consumieron con largueza y generosidad durante aquellas fiestas Pero lo que maacutes indigna al autor (o autores) fue que llegasen a entrar mujeres en el convento

y aunque todo esto es malo delante de Dios y delante de los hom-bres lo que maacutes mal parecioacute y de que todo el mundo tuvo que mur-murar fueacute la demasiada libertad rotura y disolucioacuten que hubo en en-trar y estar muy de propoacutesito mujeres no soacutelo la Vireyna y las suyas sino otras muchas dentro del dicho convento y andar por las celdas como si fuese cosa profana y como si no hubiera breve apostoacutelico que soacute graves penas y censuras prohibe estas entradas y como si a los frai-les no los comprendiera el dicho breve por admitirlas y no estuviera asiacute declarado y mandado por nuestros estatutos generales de Toledo (Romero 4-5)

La preocupacioacuten por las laquotentaciones de la carneraquo fuera del matrimonio siempre es-tuvo en la mente de los religiosos espantildeoles asiacute como de otras nacionalidades y reli-

160 JUAN FRANCISCO MAURA

giones que intentaban vanamente erradicar algo tan intriacutenseco al ser humano como a cualquier otra especie animal Esta preocupacioacuten se acentuoacute mucho maacutes en el Nuevo Mundo donde muchas sociedades tribales no veiacutean a la mujer como parte integrante de su propiedad privada La razoacuten es obviamente socioloacutegica y ha existido desde el principio de los tiempos en las civilizaciones maacutes primitivas laquoNo desearaacutes a la mujer del proacutejimoraquo El quebrantar este precepto equivaldriacutea a desestabilizar desde su base a la sociedad judeo-cristiana fundamentada en la familia Las penas aplicadas en estas transgresiones seraacuten lo suficientemente severas como para marginar socialmente mdashen el mejor de los casosmdash a aquellos que las pongan en praacutectica Siendo la mujer la encar-gada por la naturaleza de trasmitir la descendencia de la especie su libertad sexual se veraacute limitada por el peligro de quedar embarazada cada vez que ignore tal elemental precepto140

Primeras escritoras del Nuevo Mundo

Contra cuerdos y contra locos estaacute obligado cualquier caballero andante a volver por la honra de las mujeres cualesquiera que sean Cuanto maacutes por las reinas de tan alta guisa y pro como fue la reina Madaacutesima a quien yo tengo particular aficioacuten por sus buenas partes porque fuera de haber sido fermosa ademaacutes fue muy prudente y muy sufrida en sus calamidades que las tuvo muchas (Cervantes Don Quijote)

Fueron varias las escritoras que durante los siglos XVI y XVII tuvieron una relacioacuten di-recta o indirecta con el Nuevo Mundo Muchas de ellas eligieron la vida monaacutestica mdashen algunos casos como refugio huyendo de sus maridosmdash uacutenica salida en una estructura social en donde no eran muchas las opciones especialmente en una eacutepoca donde el fac-tor religioso pesaba casi tanto como el econoacutemico pero sobre todo para dedicarse a una vida espiritual difiacutecilmente alcanzable en otras circunstancias Mariloacute Vigil apunta que las monjas que lo eran por su propia voluntad ademaacutes de tener inquietudes religiosas tambieacuten las teniacutean intelectuales como es el caso de la escritora miacutestica espantildeola Santa Teresa de Jesuacutes (1515-1582) que ademaacutes de tener una de las vidas maacutes interesantes que se conozcan supo sacar tiempo para escribir las maacutes bellas manifestaciones de la poesiacutea liacuterica y sobre todo de la prosa castellana (Vigil 237-38) Cada una de estas mujeres de-dicadas a la vida literaria y espiritual de su tiempo se merece muchiacutesimo maacutes espacio del que se les pueda ofrecer en estas pocas liacuteneas No obstante con estas pasajeras men-

140 Aunque afortunadamente las cosas han cambiado para la mujer no se debe dejar de mencionar la can-tidad de abusos sexuales de la que es viacutectima en la sociedad moderna

161ESPANtildeOLAS DE ULTRAMAR EN LA HISTORIA Y EN LA LITERATURA

ciones se espera al menos incluirlas y poder despertar el suficiente intereacutes para que sus vidas y sus obras no sigan sumergidas en las simas del olvido Para que estas mujeres de la iglesia pudiesen satisfacer su curiosidad cognoscitiva era necesario romper todas aquellas barreras que supusiesen un estorbo o una restriccioacuten a la hora de investigar consultar o hablar con cualquier persona religiosa de cualquier orden o secular ya fue-se obispo o cleacuterigo Las posiciones intelectuales entre las diferentes oacuterdenes religiosas fueron muy dispares como bien es sabido No eran iguales los planteamientos teoloacute-gicos de los dominicos que los de los franciscanos o los de los carmelitas que los de los agustinos o jesuitas Era necesario por lo tanto tener acceso a estas fuentes de informa-cioacuten para poder constrastar las diferencias y hacer valoraciones propias (Vigil 237-38) El escritor espantildeol Caro Baroja destaca el caraacutecter enciclopeacutedico del catolicismo donde se han integrado corrientes y posturas muy dispares que a traveacutes del diaacutelogo daban cierto espacio al creyente con maacutes curiosidad intelectual para que este pudiese compa-rar y valorar las diferentes opciones que se le ofreciacutean (Vigil 237-38)

Varias de estas mujeres intelectuales fueron hijas de conquistadores que aunque na-cidas en suelo americano seguiacutean expresaacutendose en la lengua de sus padres con no me-nos fuerza que sus contemporaacuteneas peninsulares Es cierto que existieron numerosas escritoras en el Nuevo Mundo durante el siglo XVIII algunas dedicadas incluso al estudio de las matemaacuteticas como la mexicana Dontildea Francisca Gonzaga y Castillo Pero para limitar el presente trabajo a los siglos XVI y XVII uacutenicamente se incluiraacuten ejemplos de estos dos siglos

La peruana Josefa de Alarcoacuten publicoacute en 1648 unas liras dedicadas a las Exequias del Priacutencipe Baltasar Carlos

Cifro en capilla breveEl tribunal de la Magestad maacutes graveEn fe de lo que debeA Carlos que en dos mundos no cabe141

El caso de Sor Jeroacutenima de la Asuncioacuten es muy interesante una mujer que tuvo la oportunidad de viajar a Meacutexico y posteriormente a las Filipinas para cumplir con las mi-siones que le habiacutean sido encomendadas por su orden Nacida en Toledo en 1555 en el seno de una noble y acaudalada familia estuvo destinada a recorrer el mundo ofrecien-do sus servicios a todos los necesitados distinguieacutendose por su ardiente caridad laquovien-do que los galeotes eran tratados con dureza excesiva sobre todo cuando los llevaban de un pueblo a otro procuroacute aliviar las penas de aquellos desgraciados y lo consiguioacute en parteraquo (Serrano y Sanz 268 65) Hija del licenciado e ilustre jurista Pedro Garciacutea Yaacute-ntildeez y de dontildea Catalina de la Fuente ingresoacute contra su voluntad en el monasterio de las Clarisas de Santa Isabel de los Reyes (Toledo) el 5 de agosto de 1570 (Trevintildeo 46) hay que decir que eacutesta no seraacute la uacutenica voluntad contra la que tuvo que luchar

Sor Jeroacutenima se embarcoacute para Meacutexico y de alliacute partioacute hacia Manila junto con siete compantildeeras en el famoso laquoGaleoacuten de Manilaraquo que saliacutea anualmente del puerto mexi-cano de Acapulco Su viaje a las Filipinas duroacute un antildeo y tres meses desde su salida de Espantildea tiempo en el que demostroacute un gran valor y determinacioacuten por el soacutelo hecho de

141 Manuel Serrano y Sanz Apuntes para una biblioteca de escritoras espantildeolas desde el antildeo 1401 al 1833 vols 268 269 270 271 Biblioteca de Autores Espantildeoles (Madrid Atlas 1975) 268 19

162 JUAN FRANCISCO MAURA

embarcarse en tan precarias naves Fue la primera misionera de Oceaniacutea muriendo en Manila en 1621 Alliacute fundoacute el monasterio de Santa Clara que perviviriacutea hasta ser bom-bardeado en la Segunda Guerra Mundial (Trevintildeo 47) Escribioacute su Vida donde trata de la fundacioacuten del convento y de todas las tribulaciones mdashllegoacute a ser excomulgadamdash y satisfacciones que una vida dedicada a una causa justa proporciona Tambieacuten escribioacute una obra de caraacutecter filosoacutefico-teoloacutegico titulada Carta de marear en el mar del mundo nombre alegoacuterico que da cuenta de la enorme distancia recorrida a traveacutes del laquomar del espiacuterituraquo por sor Jeroacutenima He aquiacute algunos de sus versos de caraacutecter religioso

Vuestra soy para vos naciacuteiquestQueacute mandaacuteis hacer de miacute Inaccesible grandezaEterna Sabiduriacuteay bondad del alma miacuteaDios un ser poder y Altezamirad la suma pobrezade eacutesta que se ofrece aquiacuteiquestQueacute mandaacuteis hacer de miacute (Serrano y Sanz 268 66)

Ya en Meacutexico tenemos otro ejemplo de una mujer dedicada por completo a Dios y al estudio y composicioacuten de obras de caraacutecter teoloacutegico Dontildea Ana Mariacutea del Costa-do de Cristo nacida en la ciudad de Tlaxcala hacia el antildeo 1650 Tomoacute la orden de San Francisco para consagrarse a las labores de su orden y a la escritura Se dice que con los escritos de Dontildea Ana Mariacutea se podriacutean formar veinte tomos (Serrano y Sanz 268 282) Estas son algunas de sus obras Vida y muerte de Jesucristo Nuestro Sentildeor Vida del Seraacutefico Padre San Francisco de Asiacutes Vida de la iacutenclita Virgen Santa Clara Vida del sutiliacutesimo doctor Juan Duns Escoto

Pero no todas las monjas tuvieron vidas tan dedicadas al estudio y la oracioacuten Loacutegica-mente entre un nuacutemero tan grande de mujeres existioacute de todo y seriacutea un error pensar que todos los conventos femeninos estaban integrados por laquocaacutendidas palomasraquo Una monja en el siglo XVI y XVII teniacutea mucha maacutes fuerza que una mujer ordinaria ya que actuaban en grupo y la entrada a los recintos donde viviacutean estaba permitida solo a mu-jeres Esta situacioacuten las haciacutea mucho maacutes fuertes a todos los niveles que una mujer sola protegida uacutenicamente por su familia laquoLas monjas durante los siglos XVI y XVII lucharon por eludir la clausura y por zafarse del control que los frailes de las secciones masculi-nas de sus congregaciones ejerciacutean sobre ellasraquo (Vigil 230) Soacutelo un antildeo maacutes tarde que dontildea Ana Mariacutea del Costado de Cristo en 1651 y a 12 leguas de Meacutexico nacioacute la sin par Sor Juana Ineacutes de la Cruz hija de don Pedro Manuel de Asbaje natural de Vergara (Vizcaya) y de Dontildea Isabel Ramiacuterez de Santillana hija de espantildeoles (Serrano y Sanz 268 289) Por ser sin lugar a dudas la poeta maacutes importante de su tiempo y probable-mente la maacutes conocida del mundo hispano no profundizaremos en ella Su obra es un canto a la inteligencia y el exponente maacutes destacado de la literatura barroca americana tanto en prosa como en verso Destacareacute simplemente que Sor Juana Ineacutes pese a vivir en un sociedad donde no eran excesivas las libertades concedidas a las mujeres tuvo el caraacutecter y la determinacioacuten de dejarnos las maacutes bellas poesiacuteas amorosas que si bien estuvieron enmarcadas en un ambiente religioso como era de esperar por su condicioacuten

163ESPANtildeOLAS DE ULTRAMAR EN LA HISTORIA Y EN LA LITERATURA

pudieron transcender como unas de las maacutes bellas manifestaciones literarias que hoy en diacutea se conservan Fue su agudeza mental sensibilidad y cultura tal que no fueron suficientes los soacutelidos muros del convento para contener el genio de tan extraordinaria mujer Recordemos sus conocidiacutesimos versos en defensa de las mujeres

Hombres necios que acusaacuteisa la mujer sin razoacutensin ver que sois la ocasioacutende lo mismo que culpaacuteis142

Las metaacuteforas y la delicadeza que emplea en rebatir a su obispo en su laquoRespuesta a sor Filotea de la Cruzraquo no son solamente el epiacutetome del feminismo de su tiempo sino una de las maacutes brillantes manifestaciones del barroco hispano Poesiacutea teatro ensayo y un conocimiento extraordinario de las ciencias claacutesicas de su tiempo hacen de esta mujer un ejemplo extraordinario de las letras universales Ya son cientos los artiacuteculos y libros que se han escrito sobre Sor Juana y no dejan de aparecer tesis doctorales sobre los maacutes diversos temas conectados con la citada autora143 Como nos dice Stephanie Merrim en su documentada obra Early Modern Womenrsquos Writing and Sor Juana Ineacutes de la Cruz

She wrote and published on secular themes as atypical for a nun as human love Her remarkably extensive writings essayed and reenacted most of the (male) poetic dramatic theological and even philosophi-cal discourses of her times in the metropolis making her works a com-pendium of baroque culture in its diversity and syncretism Sor Juana self-creation as a learned women effectively toppled many of the walls in which she was materially enclosed and positioned her within the dynamic world of early modern European culture (xii)

No se debe dejar de mencionar a otras escritoras novohispanas de la eacutepoca que aun-que no fueron tan proliacuteficas y relevantes como Juana Ineacutes de la Cruz dejaron testimo-nio de algunos acontecimientos que tienen intereacutes socioloacutegico o testimonial Este es el caso de Dontildea Mariacutea Estrada Medinilla de igual nombre y apellido que la mujer que acompantildeoacute a las tropas de Corteacutes en su primera entrada a Meacutexico Natural de Meacutexico publicoacute toda su obra a mediados del siglo XVII concentraacutendose principalmente en la lle-gada del Marqueacutes de Villena virrey y capitaacuten general de la Nueva Espantildea a la ciudad de Meacutexico en el antildeo 1640 Escrita en octavas reales la obra trata de las fiestas de toros y cantildeas con que se obsequioacute al citado virrey Fue impresa en Meacutexico en 1641 (Serrano y Sanz 269 402)

Mucho maacutes importante para el presente libro es Dontildea Isabel de Guevara que escribioacute en 1556 la carta en que se expone la ayuda que ofrecieron las mujeres en el descubri-miento y conquista del Riacuteo de la Plata No cabe la menor duda de que esta carta es uno

142 Para una mejor comprensioacuten del caraacutecter de esta excepcional mujer veacutease entre los numeros trabajos publicados Fredo Arias de la Canal Intento de psicoanaacutelisis de Juana Ineacutes y otros ensayos sorjuanistas (Meacutexico Frente de Afirmacioacuten Hispanista 1972) 47

143 Veacuteanse entre otros trabajos Octavio Paz Sor Juana Ineacutes de la Cruz o las trampas de la fe Georgina Sabat de Rivers En busca de Sor Juana Margo Glantz Sor Juana la comparacioacuten y la hipeacuterbole Gerard C Flynn Sor Juana Ineacutes de la Cruz Stephanie Merrim Feminist perspectives on Sor Juana Ineacutes de la Cruz Pamela Kirk Sor Juana Ineacutes de la Cruz religion art and feminism

164 JUAN FRANCISCO MAURA

de los documentos maacutes importantes con que contamos en relacioacuten a la aportacioacuten fe-menina en el proceso de la conquista de Ameacuterica Su importancia viene dada por varios factores Primero es uno de los primeros testimonios mdashsi no el primeromdash en donde se expone abiertamente la indispensable colaboracioacuten de las mujeres en el descubrimien-to y conquista de tierras en el Nuevo Mundo laquoQue si no fuera por ellas todos fueran acabadosraquo En segundo lugar la informacioacuten vertida en estas liacuteneas presenta en parte la manera de pensar de una mujer espantildeola en tales circunstancias Extraordinario tes-timonio de primera mano que nos da una idea de lo que significoacute en muchos casos el valor y entrega constantes de muchas de estas mujeres que auacuten a riesgo de perder sus vidas no dudaron en luchar al lado de los hombres por una causa que consideraban laquocomuacutenraquo

La relevancia histoacuterica de dicha carta hace que merezca ser transcrita en su totali-dad

Carta de dontildea Isabel de Guevara a la princesa gobernadora dontildea Juana exponiendo los trabajos hechos en el descubrimiento y conquista del Riacuteo de la Plata por las mujeres para ayudar a los hombres y pidiendo repartimiento

para su marido Asuncioacuten 2 de julio de 1556

Muy alta y muy poderosa sentildeora

A esta provincia del Riacuteo de la Plata con el primer gobernador de ella don Pedro de Mendoza hemos venido ciertas mujeres entre las cuales ha querido mi ventura que fuese yo la una y como la armada llegase al puerto de Buenos Aires con mil quinientos hombres y les faltase el bastimento fue tamantildea el hambre que a cabo de tres meses murie-ran los mil esta hambre fue tamantildea que ni la de Jerusalem se le puede igualar ni con otra ninguna se puede comparar Vinieron los hombres en tanta flaqueza que todos los trabajos cargaban de las pobres mu-jeres asiacute en lavarles las ropas como en curarles hacerles de comer lo poco que teniacutean limpiarlos hacer centinela rondar los fuegos armar las ballestas cuando algunas veces los indios les veniacutean a dar guerra hasta cometer a poner fuego en los versos y a levantar los soldados los que estaban para ello dar arma por el campo a voces sargentean-do y poniendo en orden los soldados porque en este tiempo como las mujeres nos sustentamos con poca comida no habiacuteamos caiacutedo en tanta flaqueza como los hombres Bien creeraacute V A que fue tanta la so-licitud que tuvieron que si no fuera por ellas todos fueran acabados y si no fuera por la honra de los hombres muchas maacutes cosas escribiera con verdad y los diera a ellos por testigos Esta relacioacuten bien creo que la escribiraacuten a V A maacutes largamente y por eso cesareacute Pasada esta tan peligrosa turbunada determinaron subir el riacuteo arriba asiacute flacos como estaban y en entrada de invierno en dos bergantines los pocos que quedaron vivos y las fatigadas mujeres los curaban y los miraban y les guisaban la comida trayendo la lentildea a cuestas fuera del naviacuteo y animaacutendolos con palabras varoniles que no se dejasen morir que presto dariacutean en tierra de comida metieacutendolos a cuestas en los

165ESPANtildeOLAS DE ULTRAMAR EN LA HISTORIA Y EN LA LITERATURA

bergantines con tanto amor como si fueran sus propios hijos Y como llegamos a una generacioacuten de indios que se llaman tinbues sentildeores de mucho pescado de nuevo los serviacuteamos en buscarles diversos modos de guisados porque no les diese en rostro el pescado a causa de que lo comiacutean sin pan y estaban muy flacos Despueacutes determinaron subir el Paranaacute arriba en demanda de bastimento en el cual viaje pasaron tanto trabajo las desdichadas mujeres milagrosamente quiso Dios que viviesen por ver que en ellas estaba la vida de ellos porque todos los servicios del naviacuteo los tomaban ellas tan a pechos que se teniacutea por afrentada la que menos haciacutea que otra sirviendo de marear la vela y gobernar el naviacuteo y sondar de proa y tomar el remo al soldado que no podiacutea bogar y escotar144 el naviacuteo y poniendo por delante a los soldados que no se desanimasen que para los hombres eran los trabajos verdad es que a estas cosas ellas no eran apremiadas ni las haciacutean de obliga-cioacuten ni las obligaba si solamente la caridad Asiacute llegaron a esta ciudad de la Asuncioacuten que aunque ahora estaacute muy feacutertil de bastimentos en-tonces estaba de ellos muy necesitada que fue necesario que las muje-res volviesen de nuevo a sus trabajos haciendo rosas con sus propias manos rosando y carpiendo y sembrando y recogiendo el bastimento sin ayuda de nadie hasta tanto que los soldados guarecieron de sus fla-quezas y comenzaron a sentildeorear la tierra y adquirir indios e indias de su servicio hasta ponerse en el estado en que ahora estaacute la tierra He querido escribir y traer a la memoria de V A para hacerle saber la ingratitud que conmigo se ha usado en esta tierra porque al presente se repartioacute por la mayor parte de los que hay en ella asiacute de los anti-guos como de los modernos sin que de miacute y de mis trabajos se tuviese ninguna memoria y me dejaron de fuera sin me dar indio ni ninguacuten geacutenero de servicio Mucho me quisiera hallar libre para me ir a presen-tar delante de VA con los servicios que a SM he hecho y los agravios que ahora se me hacen mas no estaacute en mi mano porque estoy casada con un caballero de Sevilla que se llama Pedro de Esquivel que por servir a SM ha sido causa que mis trabajos quedasen tan olvidados y se me renovasen de nuevo porque tres veces le saqueacute el cuchillo de la garganta como allaacute VA sabraacute A que suplico mande me sea dado mi repartimiento perpetuo y en gratificacioacuten de mis servicios [en el origi-nal del AHN Diversos doc 141 dice ademaacutes mande que sea proveydo mi marido de alguacuten cargo conforme a la calidad de su persona pues el de su parte por sus servicios lo merece] lo merece Nuestro sentildeor acre-ciente su Real vida y estado por muy largos antildeos De esta ciudad de la Asuncioacuten y de julio 2 1556 antildeosServidora de V A que sus Reales manos besa

Dontildea Isabel Guevara

144 Sacar agua de un riacuteo acequia o presa

166 JUAN FRANCISCO MAURA

Sobremdash A la muy alta y muy poderosa sentildeora Princesa dontildea Joana Gobernadora de los reinos de Espantildea etc ndash En su Consejo de Indias (Isabel de Guevara 619-21)

Iroacutenicamente la carta teniacutea que llegar a manos de la desdichada heredera del trono de Castilla e hija de los Reyes Catoacutelicos Juana laquola Locaraquo que habiacutea muerto el antildeo an-terior Son profeacuteticas las palabras de esta mujer no soacutelo porque sus hechos personales quedasen en el olvido sino porque incluso se ha borrado la historia de las mujeres en el Nuevo Mundo negando su presencia Por lo menos Isabel Guevara tuvo acceso a una pluma iquestCuaacutentas seriacutean las que ni siquiera sabriacutean escribir

Otra contemporaacutenea fue dontildea Leonor de Iciz que vivioacute durante la segunda mitad del siglo XVI Interesa sobre todo por los sonetos que escribioacute en elogio de Ercilla soldado que participoacute en la conquista de Chile y que se inmortalizoacute con su obra La Araucana (Serrano y Sanz 269 534) Lo mismo hizo Dontildea Bernarda Lintildeaacuten en 1610 autora de otro soneto en memoria del capitaacuten Gaspar Peacuterez de Villagraacute que participoacute en la conquista de Nuevo Meacutexico (Serrano y Sanz 270 14) Los escritos de estas mujeres tratan de de dos de las eacutepicas maacutes dramaacuteticas de la conquista

En el Peruacute y en pleno siglo XVII aparece otra fundadora de conventos Sor Bernardina de Jesuacutes que ademaacutes fue comparada con Santa Teresa por la semejanza de sus laquocartasraquo con las de la santa de Avila Fue fundadora del convento de Tacunga en Quito maacutes tarde destruiacutedo por un terremoto Dice Serrano y Sanz con respecto a su biografiacutea un tanto legendaria que fue carmelita descalza de Lima y hermana de Dontildea Mariacutea Benavides y Esquivel abuela de D Pedro de Peralta Barnuevo (Serrano y Sanz 269 553) Dicen que esta santa se alimentoacute durante treinta antildeos con laquochochos y caacutescaras de naranja hecho tan raro como increiacuteble Cuando fallecioacute reparaban las monjas en ponerle una vara de azucenas porque habiacutea sido casada y aquellas flores aparecieron milagrosamente sobre el cadaacuteverraquo (Serrano y Sanz 269 553)

Otra limentildea del primer cuarto del siglo XVII con reputacioacuten de santa fue Dontildea Luisa Melgarejo En este caso no se trata de una religiosa de oficio sino de la mujer del doctor Juan de Soto La uacutenica diferencia es que dontildea Luisa al parecer teniacutea laquovisiones y reve-lacionesraquo lo que debioacute poner nervioso a maacutes de un miembro del tribunal del laquoSanto Oficioraquo que consideraron sus escritos laquoculpadosraquo De su papel de laquosantaraquo pasa por lo tanto al de laquoposesaraquo o laquoendemoniadaraquo El inquisidor de Lima Gaitaacuten escribioacute un infor-me donde a traveacutes de la opinioacuten puacuteblica y de otras averiguaciones se deciacutea que dontildea Luisa Melgarejo laquomujer santaraquo sabiacutea cuando las almas de los difuntos saliacutean del Purga-torio El diacutea 14 de noviembre de 1623 se decidioacute tomar posesioacuten de todos los cuadernos en los que habiacutea escrito las experiencias de todos sus laquoarrobos suspensiones extasis y revelacionesraquo Estos cuadernos una vez recogidos presentaron toda una serie de al-teraciones borrones adiciones enmiendas incluso diferente letra por lo que despueacutes de haber sido examinados resultaron culpables145 Excelente imaginacioacuten debioacute tener dontildea Luisa Melgarejo la suficiente al parecer para convencer a algunos miembros de la iglesia de que en sus escritos laquohabiacutea algoraquo que mereciacutea la pena Estas cosas ocurriacutean en Lima uno de los centros culturales maacutes importantes de la vida social y poliacutetica en la Ameacuterica espantildeola Lima a comienzos del siglo XVII seguacuten el empadronamiento llevado

145 Serrano y Sanz 270 47 Veacutease J T Medina Historia del tribunal del Santo Oficio de la Inquisicioacuten de Lima (1569-1820) (Santiago Imprenta Gutemberg 1887) Tomo II 34-41

167ESPANtildeOLAS DE ULTRAMAR EN LA HISTORIA Y EN LA LITERATURA

a cabo en 1614 por el marqueacutes de Montesclaros era una ciudad de 25000 habitantes de los que 11000 eran espantildeoles El nuacutemero de religiosos y religiosas llegaba a 1720 (Pittaluga 77)

Se sabe que en la Isla de Santo Domingo durante el siglo XVI nacioacute o al menos resi-dioacute una poeta de ceacutelebre apellido en los aconteceres del Nuevo Mundo Dontildea Elvira de Mendoza de la que se conserva un manuscrito en la Real Academia de la Historia laquoCantares miacuteos que estaacuteis rebeladosraquo Eugenio de Salazar hace un elogio de ella como poeta en un Soneto a la ilustre Poeta y Sentildeora Dontildea Elvira de Mendoza moradora en la ciudad de Santo Domingo (Serrano y Sanz 270 53)

Nacida en Burgos sobre el antildeo 1590 dontildea Luisa de Padilla merece un lugar aparte dentro del grupo de mujeres escritoras de su eacutepoca Por su estilo faacutecil y castizo su no-vedad de pensamientos y su rica erudicioacuten recibioacute el siguiente comentario de Manuel Serrano y Sanz laquoPocas figuras hay en nuestra historia literaria femenil que puedan compararse a esta eminente prosista acaso la maacutes notable de cuantas florecieron en Es-pantildea durante el siglo XVIIraquo (Serrano y Sanz 270 95-96) Este comentario y comparacioacuten deberiacutea ampliarse para que tambieacuten incluyese a laquola historia literaria varonilraquo

Dontildea Luisa fue defensora de la labor que la Inquisicioacuten estaba realizando en la laquolim-piezaraquo de mujeres laquosoldados del demonioraquo que existieron en algunas provincias espa-ntildeolas en aquel tiempo Muchas de las mujeres que combinaban la magia con los po-deres curativos fueron condenadas no solamente por hombres de la Inquisicioacuten sino tambieacuten por mujeres de todas las clases sociales como es el caso de Luisa de Padilla condesa de Aranda En su obra Elogios de la verdad e invectiva contra la mentira preveniacutea contra aquellos que practicaban artes en contra de la religioacuten cristiana La magiacutea negra seguacuten Padilla era la causante de que muriesen casi tantas personas como otras causas naturales habieacutendose descubierto hasta seis mil brujas en Vizcaya y Guipuzcua con-fesando una mujer de un pueblo pequentildeo haber matado con su laquomagiaraquo a ochocientas personas (Perry 31) Eran estos laquomales de ojoraquo y maldiciones seguacuten la autora las causas de que se secasen los pechos de las madres lactantes que se separasen las parejas casa-das y que abortasen las embarazadas (Perry 31)

Si se tiene en cuenta que dontildea Luisa estuvo emparentada con la maacutes rancia aristocra-cia de su tiempo o lo que es lo mismo con algunos de aquellos que en cierta manera dirigiacutean los destinos de Espantildea en aquella eacutepoca (Duques de Lerma Duque de Uceda Marqueacutes de Cueacutellar Conde de Santa Gadea Marqueacutes de Belmonte por citar algunos) se comprenderaacute mejor su identificacioacuten con una institucioacuten que en teoriacutea velaba por la salvaguarda de los valores laquoeternosraquo de una Espantildea destinada a ser la campeona del ca-tolicismo durante los siglos XVI y XVII El padre de dontildea Luisa fue don Martiacuten de Padilla y Manrique extraordinario militar que proboacute su valor contra enemigos moriscos ingle-ses holandeses piratas berberiscos y el renegado genoveacutes Muley Faxad Fue veterano de la batalla de Lepanto donde apresoacute a cuatro galeras y acompantildeoacute con su escuadra a la reina Dontildea Margarita de Austria cuando vino de Geacutenova en 1598 laquoHabiacutea obtenido a 24 de julio de 1587 el tiacutetulo de Conde de Santa Gadea y en 1596 el de Capitaacuten General de la Armada del mar Oceacuteanoraquo (Serrano y Sanz 27095-96)

Por otra parte tambieacuten se sabe que dontildea Luisa participoacute directamente y desde tem-prana edad en la praacutectica de algunas actividades intelectuales como la historia y la arqueologiacutea a la vez que dedicaba su tiempo a virtudes cristianas como la caridad y el socorro de los necesitados (Serrano y Sanz 270 97) Resulta mucho maacutes faacutecil compren-

168 JUAN FRANCISCO MAURA

der la postura ideoloacutegica de esta gran mujer si tienen en cuenta ademaacutes de los factores antes mencionados otros tantos de caraacutecter biograacutefico concernientes a su educacioacuten y matrimonio

Otra escritora fue la mexicana dontildea Mariacutea Casilda Pozo natural de Temestla (Meacutexi-co) Nacida en el mes de abril de 1682 dejoacute escrita su biografiacutea en 16 cuadernos el ma-nuscrito original se encuentra en la biblioteca del colegio de San Gregorio de Meacutexico Fue su confesor el jesuiacuteta Domingo Quiroga que fue quieacuten la incitoacute a escribir su obra (Serrano y Sanz 270 137) Sor Juana de San Antonio aparece a principios del siglo XVII formando parte de un grupo de religiosas espantildeolas que fueron a Manila por la ruta de Meacutexico Ademaacutes de distinguirse por sus cualidades personales su obra interesa por ofrecer informacioacuten testimonial y costumbrista acerca de la forma de vestir de chinos y japoneses (Serrano y Sanz 270 225)

Otra monja esta vez ecuatoriana fue Gertrudis de San Ildefonso Nacida en 1652 profesoacute su vocacioacuten en el convento de Santa Cruz de Quito dejando escrita su vida por mandato de su confesor el padre Martiacuten de la Cruz el cual hizo una biografiacutea laquoen tres gruesos voluacutemenesraquo Gertrudis de San Ildefonso murioacute en 1709 (Serrano y Sanz 270 300) en olor de santidad

Sor Mariacutea Ana Agueda de San Ignacio nacioacute el 3 de marzo de 1695 en la dioacutecesis de la puebla de los Angeles en un rancho del lugar de Santiago Tecaliacute (Serrano y Sanz 270300) Esta monja mexicana escribioacute varias obras durante su vida conventual a lo largo de la cual desempentildeoacute el cargo de priora por muchos antildeos Entre sus obras todas de caraacutecter piacuteo y de laquoamor divinoraquo escribioacute un curioso y laquocopiosoraquo tratado de la Leche virginal de la Soberana Madre de Dios El padre Fr Juan de Villa Saacutenchez hace el siguiente comentario al respecto laquoen que hablando primero en sentido natural de los beneficios que debemos a Nuestra Sentildeora pasa a tratar en sentido miacutestico y alegoacuterico enten-diendo en la leche la doctrinaraquo (Serrano y Sanz 270301) Mexicana fue tambieacuten Sor Petronila de San Joseacute que ejercioacute como abadesa del Real monasterio de Jesuacutes Mariacutea de la ciudad de Meacutexico Escribioacute Vidas de varias religiosas ejemplares obra que tiene su im-portancia ya que al parecer laquoDe esta obra se sirvioacute D Carlos de Siguumlenza y Goacutengora para escribir su Parayso Occidental (Meacutexico 1684) seguacuten eacutel mismo declara en el proacutelogo diciendo lsquoa quien si hay algo bueno en esta historia se le debe todorsquoraquo (Serrano y Sanz 270 354) Menos conocida fue su compatriota Sor Luisa de Santa Catalina natural de Xacona laquopueblo situado en las inmediaciones de Zamora (Meacutexico)raquo siendo bautizada en 1682 Escribioacute Cartas espirituales a su confesor el P Juan Loacutepez de Aguado (Serrano y Sanz 270 361-62)146

Todos estos escritos la mayoriacutea de ellos ignorados por el gran puacuteblico tienen la im-portancia de darnos una perspectiva diferente En otras palabras ensentildearnos la maacutes refinada sensibilidad de muchas mujeres que permanecieron y en su mayoriacutea siguen permaneciendo a laquooscurasraquo de una eacutepoca tan rica de la literatura espantildeola como fue el Siglo de Oro Este siglo fue tambieacuten en su dimensioacuten literaria y artiacutestica patrimonio de la mujer

146 Para profundizar en muchas de estas escritoras hispano-americanas la consulta de la Biblioteca Hispano-Americana de Beristain de Souza resulta de capital importancia

169ESPANtildeOLAS DE ULTRAMAR EN LA HISTORIA Y EN LA LITERATURA

Sor Nada ardores divinos de una monja adolescente escritos ineacutedi-tos de una recieacuten profesa del siglo XVI147

iexclQueacute encantadores son tus amores hermana miacutea espo-sa iexclQueacute deliciosos son tus amores maacutes que el vino Y el aroma de tus perfumes es mejor que el de los baacutelsamos Miel virgen destilan tus labios esposa miel y leche hay en tu lengua y el perfume de tus vestidos es como aroma de incienso (Cantar de los Cantares 4 10-11)

Sor Nada llamada asiacute por humildad seguacuten dice el Indice de manuscritos de la Biblio-teca Nacional de Madrid es uno de los ejemplos maacutes desconocidos e interesantes que tenemos de la poesiacutea y prosa amoroso-religiosa del siglo XVII Hasta la fecha nunca se habiacutea publicado su obra e incluso hasta el antildeo 1995 para mi sorpresa no habiacutea copias microfilmadas de sus manuscritos en la Biblioteca Nacional Serrano y Sanz en su libro Apuntes para una Biblioteca de Escritoras Espantildeolas hace una escueta y pasajera mencioacuten de esta mujer y de su obra (68-69) siendo eso todo lo que hasta ahora se sabiacutea de ella Sus escritos consisten en los siguientes manuscritos

1 laquoEn queacute consiste un verdadero amor de Diosraquo 9 hojas uacutetiles en 4ordm letra del siglo XVII Biblioteca Nacional de Espantildea Manuscrito 1295926

2 laquoPintura del Propio Amorraquo laquoPintura del propio Amorraquo 10 hojas uacutetiles en 4ordm letra del siglo XVII Biblioteca Nacional de Espantildea Manuscrito 1295927

3 laquoEsplicacioacuten sobre en queacute consiste la paz del Almaraquo laquoQuartillas aacute un Alma que padece soledad interiorraquo 7 hojas uacutetiles en 4ordm letra del siglo XVII Biblioteca Nacio-nal de Espantildea Manuscrito 1295828

En cuanto a su persona soacutelo se nos dice que laquose encubrioacute con este seudoacutenimo laquoSor Nadaraquo Esta monja desconocida de origen hispanoamericano posee toda la frescura e ingenuidad de una joven apasionada metida por vocacioacuten u obligacioacuten a ejercer la profesioacuten maacutes comuacuten para mujeres de cierta clase social de su tiempo En sus liacuteneas podemos encontrar un misticismo simple incluso en algunos momentos infantil pero a su vez lleno de una fuerza y sensualidad interior poco comuacuten en escritos de este geacute-nero que desborda los liacutemites del laquoamor divinoraquo a traveacutes de los diaacutelogos entre el Alma y el Esposo Sor Nada consigue proyectar su amor a Dios maacutes allaacute de una experiencia romaacutentica Su experiencia es sincera y genuinamente miacutestica trascendiendo la imita-cioacuten o la propia creacioacuten poeacutetica ficcionalizada (Hatzfeld 30) Algunos pasajes son de un

147 Veacutease mi artiacuteculo Sor Nada ardores divinos de una monja adolescente escritos ineacuteditos de una monja profesa del siglo XVIIraquo Espeacuteculo Revista de estudios literarios 26 (2004) 1-10 Universidad Complutense de Madrid http wwwucmesinfoespeculonumero26sornadahtml

170 JUAN FRANCISCO MAURA

alto contenido eroacutetico con sustantivos y metaacuteforas que recuerdan la maacutes iacutentima unioacuten amorosa en unos casos y el tierno amor maternal en otros

[T]e miro Jesus mio desnudo a las inclemencias del tiempo y ardien-do en puro fuego de Amor por la salud de las Almas y me ensentildeas a que te ame con todo mi corason y puresa de espiritu No atendiendo ni buscando umanos intereses ni a solisitar consuelos ni regalos espi-rituales que suelen empantildear la puresa del noble corason No mi Jesus amable pues antes me ensentildeaste tu puro Amor que desnudo sean [sic] de encaminar mis passos desde el pesebre asta la cuna en donde te miro tan desnudo como el pesebre y todo Sentildeor por mi Amor (Mss 12959 26 hoja 1 v)

El manuscrito (12959 27) de la mencionada serie de tres contiene algunas correccio-nes quizaacute hechas por el confesor o quizaacute por ella misma cuando se dirige con excesiva familiaridad y arrebatado fervor a su Amado148 He escogido el manuscrito (12959 Caja 28) en primer lugar por ser el ejemplo maacutes representativo de su poesiacutea y prosa En este manuscrito encontramos de forma maacutes directa que alegoacuterica toda la frescura de un diaacutelogo entre Jesuacutes y el alma que raya como diriacutea Cervantes laquoa la llana y sin rodeosraquo (667 lib 2 cap 38) con el doloroso y a veces desesperado deseo de la entrega y la unioacuten final con el Amado La ortografiacutea no ha sido corregida respetaacutendose el texto ori-ginal149 Veamos el siguiente fragmento

Mira que te amo con Amor de padre y con Amor de esposo el mas fino y puro enamorado que no tan solo me presio de darte mi mano sino tambien todo mi cuerpo y sangre para que con mi pan de vida te sustentes y te regales a tus anchuras y que con mi propio espiritu vivas en paz como tu lo deseas y que mis amores sean unico alivio en tus trabajos en esta mortal vida pues si esto es asi y sabes que muero por darte vida dime esposa mia de que te fatigas Dame querida tus bras-sos y dime si me amas como yo te amo (Hoja 4)

148 La antologiacutea de Promis ha procurado insertar entre los textos antoloacutegicos algunos que se refieren a la es-critura de mujeres fundamentalmente de aquellos generados en el interior de los espacios conventuales Estos textos se fundan como laquohistorias de vidasraquo y responden casi siempre a los requerimientos de los confesores de las monjas coloniales En este sentido resulta valiosiacutesima la incorporacioacuten de la llamada Relacioacuten autobiograacute-fica de Sor Ursula Suaacuterez como una muestra significativa de la escritura monjil entendida en esta eacutepoca (como tambieacuten en la tradicioacuten europea medieval) inserta en las denominadas laquolabores de manoraquo de las religiosas ya que el texto escrito por mandato se convertiacutea en una suerte de entramado o tejido linguumliacutestico es decir en un nuevo bordado que la mayor parte de las veces el confesor convertido en censor iba haciendo tachando y enmendando En la antologiacutea Promis agrega un texto de Sor Tadea Garciacutea de la Huerta titulado Relacioacuten de la inundacioacuten que hizo el riacuteo Mapocho de la ciudad de Santiago de Chile en el monasterio de Carmelitas titular de San Rafael el diacutea 16 de junio de 1783 se trata de un poema tipo romance escrito en versos octosilaacutebicos y que da cuenta de lo sucedido ese diacutea en el convento (Resentildea de la literatura del reino de Chile de Joseacute Promis Eddie Morales Pintildea httpwwwupaclpublicaciones2002literatura_promishtm)

149 Son frecuentes las faltas ortograacuteficas Una de ellas es el uso constante del seseo La ausencia de acentua-cioacuten y puntuacioacuten exceptuando alguacuten punto o coma arbitrario no seguido casi nunca de mayuacutescula inicial lo mismo que el uso igualmente aribitrario de la h o de b v r q g j m n x etc No olvidemos de la misma forma la laxitud linguumliacutestica existente en el siglo XVII (no sabemos a queacute parte de eacuteste pertenece el manuscrito) asiacute como la joven edad de la monja

171ESPANtildeOLAS DE ULTRAMAR EN LA HISTORIA Y EN LA LITERATURA

Los versos del presente manuscrito poseen la misma fuerza que tiene su prosa Con una estructura estroacutefica indefinida estaacuten aparentemente corregidos por alguien que tu-vo la oportunidad de conocer personalmente a la autora Muy probablemente se trate del padre al que hace referencia al principio del primer manuscrito laquoMandame el Pd que le declare en que consiste un verdadero amor a Diosraquo a continuacioacuten continuacutea con su caracteriacutestica humildad laquo[O]bedesere y dire lo q Dios me inspire segun mi rudesa y simplisidadraquo (Mss 12959 26) En cuanto a la fuerza pasional de esta joven observamos con cierta tristeza coacutemo aparece sublimada en sus escritos con toda la enegiacutea de una joven mujer llena de intensidad y vida pero encerrada en los liacutemites de un convento Veamos un ejemplo en donde responde el Alma en los siguientes versos

O mi enamorado Jesus O mi dulse y tierno amanteO alegria de los sielos O dulse Jesus amable

(Toda Sentildeor me derrito toda Sentildeor me desagoy quiero vivir por ti ea sentildeor abrasadme) [Tachado en el original]

Toda Sentildeor me derrito toda Sentildeor me desagoy quiero morir por vos ea Sentildeor que ya acabo

Ya tus amores me llaman ya tus perfumes me traencon suspiros y agonias Sentildeor hasta que te alcanse

O mi Jesus amoroso no puedo mas dilatarmeya la pasiensia me falta dulse Jesus abrasadme

(No puedo vivir sin vos no puedo mas dilatarmeya la pasiensia me falta dulse) [Tachado en el original]

No puedo vivir sin vos mi dulse Jesus amablepues me teneis echisada siendo mi esposo y mi Padre

Ay que me abraso Ay que me quemo del Amor deJesus nasareno como no tocan y tantildeen a fuego150

Estos versos llenos de arrebato sublimado conectan con toda la tradicioacuten miacutestica es-pantildeola que se remonta a Ramoacuten Llul y que culmina en el maacutes universal de nuestros

150 En toda la fuerza y simbologiacutea del amor maacutes iacutentimo del maacutes alto y sublime placer de la unioacuten de los amantes tal como lo encontramos en el Cantar de los Cantares y en San Juan de la Cruz Leemos en la Biblia

Ya me he quitado la tuacutenica iquestCoacutemo volver a vestirme Ya me he lavado los pies iquestCoacutemo volver a ensuciarlosMi amado metioacute su mano por el agujero (de la llave) y mis entrantildeas se estremecieron por eacutel Me levanteacute para abrir a mi amado Mis manos destilaron mirra y mis dedos mirra exquisita en el pestillo de la cerradura (5 3-5)

Nos ocurre lo mismo con San Juan de la Cruz en su insuperable poema laquoLlama de amor vivaraquo

iexclOh cauterio suaveiexclOh regalada llagaiexclOh mano blanda iexclOh toque delicadoque a vida eterna sabey toda deuda pagaMatando muerte en vida la has trocado

172 JUAN FRANCISCO MAURA

miacutesticos San Juan de la Cruz Esta tradicioacuten se extiende hasta finales del siglo XVII esto es hasta los finales del Barroco siendo un poco maacutes tardiacuteo en la Ameacuterica espantildeola Sin tener como propoacutesito discutir en el presente trabajo a queacute corriente miacutestica pertenece la obra de Sor Nada es necesario resaltar no obstante el hecho de que estaacute escrito por una mujer y ademaacutes de tierna edad El manuscrito 12959 Caja 26 termina con estas pa-labras laquo[T]odas estas boverias escrivi por entretenimiento siendo resien profesa en la religion Sor Nadaraquo Mas no por la juventud de su autora los escritos dejan de tener lo-gradas metaacuteforas imaacutegenes y siacutembolos sacados de la naturaleza La alegoriacutea de la unioacuten matrimonial poseeacute el fuego liacuterico de la maacutes apasionada de las relaciones amorosas vivi-ficada por perfumes flores insectos animales escarchas nieves o abrojos Por lo tanto aunque la narracioacuten destile cierta ingenuidad no carece por ello de un vocabulario rico con el sabor popular de la poesiacutea de los cancioneros y romances de tradicioacuten renacen-tista No ha sido otra mi intencioacuten que la de rescatar del olvido unos escritos en prosa y en verso llenos de frescura y espontaneidad que nos muestran la pasioacuten con que la joven novicia se laquoentrega en cuerpo y almaraquo a los menesteres de su profesioacuten guiada por un padre espiritual en esos primeros antildeos de formacioacuten Esta ha sido la razoacuten por la que presento a continuacioacuten el citado manuscrito en su totalidad

Sor Nada (Mss 1295928)

laquoEsplicacion sobre en que consiste la paz del AlmaraquolaquoQuartillas a un Alma que padece soledad interiorraquo

[7 hojas utiles en 4ordm letra del siglo XVII]

+

Esplicacion sobre en que consiste la paz del Alma

Pareseme segun mi rudo entender que la verdadera paz del Alma con-siste en una muy pura y buena consiencia en un corason liso y bien intensionado en una verdadera rectitud de espiritu en el qual el Alma procura bolar a Dios sin jamas detenerse a respetos umanos ni reparar en que me diran ni de que me censuraran sino me apresuro a seguir a unos entenderes y pareseres dorados en los quales pretende el mundo engantildear y ensuciar si se puede la puresa de un corason unicamente de Dios y de su Santa ley y se lo conserva cristalino con la divina asis-tencia de la gracia y comprendido de su Amor y temor siguiendo la luz divina de tan amante Sentildeor Dios y ombre verdadero con que este ilustrado corason ni se altera ni se mueve por los disfrasses dorados que ase el mundo y sus moradores mayormente con falssas amistades aunque con ellos muestre buena intension Con la misma grasia y luz de Dios conose el buen corason estos disfrasses que le ase el mundo y se retira de todo con espiritu y valor esto sin la menor alterasion sino que en suma paz se retira a buscar a Dios dentro de su mismo corason

173ESPANtildeOLAS DE ULTRAMAR EN LA HISTORIA Y EN LA LITERATURA

y se abrasa con su pura verdad en la qual se le descubren mil interio-res secretos tan solidos puros y verdaderos que la misma Alma queda abismada y de puro grandes no los puede bien comprender ni esplicar pero estos mismos secretos divinos le sirven de espuelas para no solo correr sino bolar con pies de plumas en seguimiento de su bien ama-do Jesus y como este soberano Sentildeor es tan amante de sus espossas las Almas luego que la ve bolar con pies de plumas la sale al encuen-tro en despoblado campo que se deve de llamar Campo de Amor de Dios y el mismo Sentildeor se viene a las manos por ser Dios que nos ama con Amor infinito de Padre benigno y amoroso con que asiendose en contra deso este divino enamorado en lo interyor de el Alma que le busca con ansias de servirle y amarle y en aquella soledad traban una conversasion amorosa y sensilla como la pluma simple de quien esto escrive

Divino enquentroDios y el Alma en la soledad

O Soberano Principe de la paz dise el Alma tus perfumes me traen a ti bolando porque alla en el mundo y sus valedores me pretendian engantildear y entretenerme con pegaminossas amistades que facilmen-te me pudieran envenenar y matarme apartandome de ti Mi dulse Jesus amable mi Redentor Soberano que con tantas ansias me sales al enquentro como siervo [ciervo] erido de mis Amores los quales tu Amor me ofrese para que con tu mismo Amor te ame y te sirva en paz sin perturbarme ni contristarme ni cansarme de padeser pasando si se ofrese por escarchas nieves espinas ni abrojos ni por otros diverssos trabajos ni piedras de contradision que tu me puedes permitir pues por mas que el mar se levante con sus ferosses olas contra mi ni piedras se me tiren al rostro en todo Sentildeor me quieres con serenidad pasifica sin la menor perturbasion Todo Sentildeor quieres que lo tome con Serenidad de espiritu y asi vengo a ti bolando para que mejor me ensentildees a vivir segun las leyes de tu noble condision que me son muy agradables por mas que el mundo me las despresie por segir sus vanidades y torsidas intensiones con apariensias de bien y con este engantildeo y bien me quie-ro mas a mi que no a mi proximo veo que segun mi pareser se pierden muchas Almas y tambien de aquellos que se depresian y pasan por muy espirituales Con que me paresen pocos los que llegan a padeser con desnudes151 de espiritu por tu purisimo Amor y me parese essas se quedan muy atrasadas en la virtud por el peligro de bolver muy atras el paso de modo que se pueden despentildear y pereser en su misma desgra-sia ya por soberbia o por otras enfermedades que se les pega al corason y asi lo pasan como siegos ignorantes sin advertir en sus peligros

151 La letra en cursiva es miacutea

174 JUAN FRANCISCO MAURA

este aquerdo Sentildeor y otros que tu verdad me ensentildea me ase venir uyendo de las paredes del mundo y me vengo a ti Dios mio bolando con las dos Alas del Amor y temor que tu mismo Amor me ofrese tan de gracia y tan de grado que no se duentildeo mio con que lo responder a tan soberano beneficio y finesa de tus entrantildeas de Amorvengo Sentildeor y esposo mio unicamente a descansar en ti pues los peli-gros del camino me an puesto en mucho sobresalto temiendo el per-derte y sin ti perderme para siempre por una eternidad sin fin pues deseo amado mio ganarme ganandote a ti y vivir en ti aora en vida y despues eternamente y estos cuidados me traen fatigada molida y cansada y no podre tener alivio y descanso sino viendome entre tus brassos aunque sea estando en cruz pues ese es el fin de mis deseos vivir y morir en ti ablame mi cordero manso y ensentildeame a que ver-daderamente te ame como fiel esposa ea mi caro amigo dame la ma-no pues sabes Amor mio que en mi no ay mano sin tu misma mano y asi mi Dios y Sentildeor mi Principe Soberano con umilde rendimiento y deseos de alcansarte te suplico me des la mano y me consueles en estos mis trabajos Deseo Sentildeor vivir en paz y los malos amores de mi Naturaleza flaca no me dejan detentar y no quieren por mi desgrasia atropellar con las leyes de tu Amor ni quisiera perturbar mi corason quando me veo con un torvellino de olas y contratiempos que a menu-do me suelen sercar pero si tu Sentildeor me das la mano nada temo sino que me aseguro y vivire en paz sin que me fatiguen los contratiempos pues mi mano en la tuya y mi espiritu en el tuyo por mas borrascas que me envistan no seran bastantes para rendir mi voluntad a la suya bien si para pronunsiar un fiat que resuene bien atras en tus oidos y que en medio de mis fatigas me ponga a cantar tus divinas misericor-dias hea Sentildeor ya pretendo serrar mis labios por no desir mas bove-rias y deseo Sentildeor oir tus palabras de vida eterna abla Sentildeor que tu sierva oye con atension y cuydado mira mi Dios que se me ase tarde y espero con prisa deseando saborearme y aprovecharme de los ecos de tu Santa dotrina pues todas tus palabras saben a eterna vida callen pues mis sentidos y potensias y todo se ponga en paz pues mi dulse y soberano Sentildeor no se escusara de ablar me aun que en mudo silensio hea mi gran Prinsipe de la paz ablame que tus puros amores me traen perdida por estos asperos montes y mis cortos pasos no te pueden dar alcanse mirame mi Dios a tus pies postrada como un vil gusano y me-nor ormiga de la tierraabla Jesus y dise a su esposa el Alma querida esposa mia que me pides y por que te muestras tan fatigada y mal sufrida no vives como corde-rita del campo buscando de mis pechos el sustancial pasto mi Amor no te sustenta y mi grasia te promete eterna vida pues dime amada de que te fatigas y te muestras mal sufrida mira que te amo con Amor de padre y con Amor de esposo el mas fino y puro enamorado que no tan solo me presio de darte mi mano sino tambien todo mi cuerpo y

175ESPANtildeOLAS DE ULTRAMAR EN LA HISTORIA Y EN LA LITERATURA

sangre para que con mi pan de vida te sustentes y te regales a tus an-churas y que con mi propio espiritu vivas en paz como tu lo deseas y que mis amores sean unico alivio en tus trabajos en esta mortal vida pues si esto es asi y sabes que muero por darte vida dime esposa mia de que te fatigas Dame querida tus brassos y dime si me amas como yo te amoResponde el Alma152 Tu mi Dios sabes si yo te amo pues de mi solo se que mis deseos y ansias buelan a ti mas no alcanso a saber si te amo como tu de-seas ser amado y como desconfio tanto de mi y de mis prosederes falssos temo Dios mio perderme y perderte y asi Sentildeor pues no desechas mis Amores y te muestras tan fino en amarme te pido me ensentildees a vivir segun las leyes de tu pura verdad y fina condisionhija mia dise Dios la prueva de un verdadero Amor consiste en sufrir callar y padeser por mi unico Amor y en todo seguir mis pasos sin ja-mas retroseder por mas fragoso que se muestre el camino pues nunca seran tantas las espinas las escarchas ni las nieves ni los vientos bo-rrascosos que te se ofrescan pasar por mi Amor como los que mi tierno y desinteresado Amor paso por ti y siempre con mis pies descalssos y asi hija y esposa mia muestrate costante en seguir lo perfecto de mis passos pues mi braso fuerte sera en ti y peleara por ti y te sera el todo en tus nesesidades y mi Amor te convertira en dulse y suave lo amargo y molesto a la condision de la carrne

Responde el Alma

O mi enamorado Jesus O mi dulse y tierno amanteO alegria de los sielos O dulse Jesus amable

(Toda Sentildeor me derrito toda Sentildeor me desagoy quiero vivir por ti ea sentildeor abrasadme) [Tachado en el original]

Toda Sentildeor me derrito toda Sentildeor me desagoy quiero morir por vos ea Sentildeor que ya acabo

Ya tus amores me llaman ya tus perfumes me traencon suspiros y agonias Sentildeor asta que te alcanse

O mi Jesus amoroso no puedo mas dilatarmeya la pasiensia me falta dulse Jesus abrasadme

(No puedo vivir sin vos no puedo mas dilatarmeya la pasiensia me falta dulse) [Tachado en el original]

No puedo vivir sin vos mi dulse Jesus amablepues me teneis echisada siendo mi esposo y mi Padre

152 La aparicioacuten de una mayuacutescula al principio de una oracioacuten es algo totalmente arbitrario en este ma-nuscrito dada la libertad ortograacutefica de la autora Como se puede observar en la mayor parte de las veces no es el caso

176 JUAN FRANCISCO MAURA

Ay que me abraso Ay que me quemo del Amor deJesus nasareno como no tocan y tantildeen a fuego

Responde Jesus Hija mia tus simples vozes oygo y aunque resuenan bien a mis oidos pero te deseo mas mansa y pasifica en tus fervores ya sabes que no siempre as de vivir en mantillas ni a los pechos de tu Madre por que es rason que padescas con espiritu fuerte como mu-jer valerosa por que a una esposa del Rey soberano y prinsipe de la paz no le estan bien chiquerias ni fervores de nintildea malcriada y ya es ora que la destete su Madre la Naturaleza y que empesando su nueva vida camine con el favor de mi grasia sigiendo mis passos de eterna vida esto con sus pies descalssos segun mis leyes de Amor puro y desinteresado lo tienen ordenado153 y vivir en paz como lo deje en-cargado a mis apostoles Santos repitiendoles varias vezes Vivir en pas y caridad esto es un vivir en Dios y Dios en el Alma y asi hija mia el Alma que vive en paz vive en mi Como mis cortesanos en el cielo y pues me pides que te ensentildee a vivir segun las leyes de mi condision Repito el desir que te debes mostrar sufrida en todo tiempo y estado sin permitir en tu corason que ni aun los fervores se adelanten con estremos ni ademanes sino atiende y aprende de mi purisima Madre pues siempre la veras si bien lo consideras que mientras vivio en el mundo en todos sus trabajos se mostro firme fuerte costante como piedra diamante Pues mirandome nintildeo entre sus brasos desnudo en el pesebre desnudo y crusificado en los brassos de una cruz En estos y otros passos no se mudo su rostro sino que en suma serenidad y pasifico corason toda se sacrificaba enteramente en los brassos de mi Amor y rendido su corason y voluntad en la de mi eterno Padre por ejemplo te la doy y deseo que aprendas de sus nobles calidades pues te aseguro carisima que las leyes de mi condision y pura verdad todo lo allaras enserrado en el corason de mi purisima Madre sedle fiel y descansaras en paz

+

Quartillas a un alma que padese soledad interior

1Un Alma afligida y tristese ve en un campo desiertay en el su esposo la tieneAtormentada y sedienta

153 Es a traveacutes de estas liacuteneas lo que hace suponer que la autora de este diaacutelogo amoroso entre el Alma y Je-suacutes es novicia esto es laquoque estaacute empesando su nueva vidaraquo En las mismas liacuteneas una vez maacutes se hace alusioacuten al laquodesteteraquo de su vida civil laquoa una esposa del Rey soberano y principe de la paz no le estan bien chiquerias ni fervores de nintildea malcriada y ya es ora que la destete su Madre la naturalesaraquo (fol 5)

177ESPANtildeOLAS DE ULTRAMAR EN LA HISTORIA Y EN LA LITERATURA

2Pendiente se ve en el AyreSolo un hilo la sustentasin tocar el pie en el sueloporque del no tome tierra

3Mirandola esta yto a ytoaquel sol que la atraviesay la enviste con sus rayosmas ella no pestantildeea

4Como sigarra padese y como a tal se atormentabatiendo sus mismas Alasy el corason se atraviesa

5Con penas sustos temoresquando se mira assi mesmasin tener valor en nadaporque es la misma flaquesa

6Pero el Amor de su esposotoda su atension le llevay la pone en un abismopero cubierto en tiniebla

7Desea dar algun bueloy subir con ligeresapero se mira travadacon una fuerte cadena

8Clama suspira y padeseMas del todo se sujetaRindiendo su voluntadA la divina clemencia

9Los enemigos del AlmaCruelmente le asen guerray ella aunque firme y constantelos reselos la atormentan

178 JUAN FRANCISCO MAURA

10de todos modos padeseaunque gosa la asistensiadel divino esposo amadoque en su interior se recrea

11Solo de verla penary con verla tan serenadise resibe mil gustosde su sigarra pequentildea

12Le sabe el mundo a mil yelesy su trato le atormentaviendo en el mil falsedadesque todas saben a tierra

13Para poderse librardeja de correr y buelacon las Alas del Amory el mismo Amor se la lleva

Una vida dedicada a un amor divino un amor que le haraacute llenar un buen nuacutemero de cuartillas dedicadas a tan alta empresa Se desconoce si la vocacioacuten de Sor Nada con-tinuoacute con tanta intensidad el resto de sus diacuteas Ciertamente la vida en el covento no era faacutecil En algunos casos la experiencia era traumaacutetica incluso fatal para algunas de las adolescentes de la Ameacuterica Espantildeola Las reglas del claustro eran severas por varias razones Estas joacutevenes si no teniacutean el permiso de la superiora no podiacutean recibir visitas no podiacutean volver a sus casas su correspondencia era censuraba y no podiacutean salir del periacutemetro conventual Igualmente se levantaban antes del amanecer para oir misa tra-bajaban el resto del diacutea y lo maacutes interesante es que muchas veces esta vida era aceptada por muchas

Page 8: Tercera parte: Mujeres en la vida intelectual - …parnaseo.uv.es/Editorial/Maura/TerceraParte.pdf · La Biblia, por su parte, hace repetidas menciones de la mujer y sobre el comporta-

138 JUAN FRANCISCO MAURA

como el mantoacuten de Manila o el abanico Fray Reginal de Lizaacuterraga dice sobre las mu-jeres del Peruacute

La criolla es ademaacutes mujer que gusta de la ostentacioacuten y del lujo vi-cios muy femeninos que en parte la compensaban de pasadas o futu-ras calamidades En el Peruacute el vestuario se hizo tan ostentoso laquoque casi no se sabe coacutemo lo pueden sufrir los maridosraquo La soberbia de ellas es demasiada y no sabemos en lo que ha de parar no creo que hay en lo descubierto del mundo ciudad en su tanto ni cuatro veces mayor que a tanta soberbia en este particular como esta nuestra ciudad llegueCon justo tiacutetulo se podriacutea moderar por los virreyes esta soberbia Pe-ro no seacute por queacute no se modera y siacute seacute por queacute ni los maridos tienen aacutenimo para moderarlo ni los gobernadores tampoco (Lizaacuterraga 38 lib 1 cap 51)

La mujer criolla participa en todos los aconteceres de su sociedad Estaacute presente en todos los acontecimientos sociales y con frecuencia econoacutemicos sin dejar por ello de controlar la vida del hogar Al igual que en Espantildea ellas se encargaraacuten de casar a sus hijas e hijos unos destinados a mantener la tradicioacuten familiar y enriquecerla otros a engrosar las filas de la iglesia

Mujeres en la vida intelectual espantildeola durante los siglos XVI y XVII131

Great genuine and extraordinary work can be done only in so far as its author disregard the method the thoughts the opinions of his contemporaries and quietly works on in spite of their criticism on his side despising what they praise No one becomes great without arrogance of this sort (Shopenhauer The Art of Literature)

De igual manera que se ha querido excluir a la mujer de las primeras paacuteginas del encuentro con el Nuevo Mundo otro tanto ha ocurrido con la labor intelectual de tan insignes mujeres Muchas pese a lo remoto de sus asentamientos lograron dar a luz los maacutes valiosos frutos de la poesiacutea liacuterica de su tiempo132 Un gran nuacutemero de estas mujeres dada la estratificacioacuten social de su eacutepoca desarrolloacute su labor en conventos Otras sin embargo hicieron lo mismo compaginando sus vidas matrimoniales con las tareas culturales La vida monacal daba ventaja en cierta forma a la hora de conseguir la independencia deseada para dedicarse por completo al mundo de las letras sin que un

131 Veacutease mi artiacuteculo laquoCara y cruz de la mujer hispana imaacutegenes del siglo XVIraquo132 Veacutease el ejemplo de Mariacutea de Alvarado la Amarilis de Lope de Vega que escribioacute su obra en los maacutes

apartados rincones de los Andes peruanos Veacutease Meneacutendez y Pelayo Marcelino Historia de la Poesiacutea Hispano-Americana 84

139ESPANtildeOLAS DE ULTRAMAR EN LA HISTORIA Y EN LA LITERATURA

marido o unos hijos se interpusiesen en el tiempo concentracioacuten y dedicacioacuten que una actividad artiacutestica requiere Pese a todo no siempre fue asiacute El maacutes conocido ejemplo lo tendriacuteamos en Sor Juana Ineacutes de la Cruz la cual tuvo que sufrir problemas con algunos altos cargos eclesiaacutesticos asiacute como envidias de propios y extrantildeos por ser entre otras cosas superior en inteligencia y cultura a la mayor parte de sus contemporaacuteneos

Muchos conventos estaban bien provistos de libros a menudo donados por aquellas familias que teniacutean alguacuten miembro dentro del convento o simplemente por simpati-zantes de las diferentes oacuterdenes religiosas En la paz del claustro algunas de estas mu-jeres llegaron a adquirir un formidable desarrollo intelectual Pero a pesar de la calidad del material que existe sobre tan insignes mujeres se las ha preferido mantener en la oscuridad Como deciacutea con ironiacutea el pensador espantildeol Benito Feijoacuteo (1676-1764) sobre las disputas entre hombres y mujeres laquoLo cierto es que ni ellas ni nosotros podemos en este pleito ser jueces porque somos partes y asiacute se habiacutea de fiar la sentencia a los aacutengeles que como no tienen sexo son indiferentesraquo (46)

El escritor argentino Vicente G Quesada ya se quejaba a principios del presente si-glo de la pobriacutesima informacioacuten que ofreciacutea la enciclopedia francesa Larousse sobre la vida colonial en Meacutexico cuando refirieacutendose a eacutesta deciacutea lo siguiente laquoLos uacutenicos libros que se conociacutean eran el almanaque el catecismo del P Ripalda el Antildeo cristiano la vida de los santos y otros de ese geacuteneroraquo (Quesada 125) El mismo autor refutando lo anterior escribe

Por uacuteltimo recordareacute la notabiliacutesima publicacioacuten moderna La Bibliogra-fiacutea mejicana del siglo XVI eruditiacutesima y que constituye el maacutes concluyen-te testimonio para desautorizar la ligereza del Dictionnaire de Larousse que afirma lo que ignoraEl celebrado escritor mejicano don Francisco Pimentel ha publicado su erudita obra Historia criacutetica de la literatura y las ciencias en Meacutejico desde la conquista hasta nuestros diacuteas es un trabajo que comprende cuatro partes divididas asiacute Novelistas oradores historiadores y autores cientiacuteficos Por esta breve relacioacuten se comprende que es temeridad indisculpable pretender dar noticias del movimiento intelectual en el virreinato de Meacutejico sin conocer las obras de Pimentel y de Garciacutea Icaz-balceta ni la edicioacuten primitiva o corregida de Beristain (126)

En los maacutes importantes nuacutecleos urbanos de Meacutexico y Peruacute se podiacutea apreciar clara-mente la participacioacuten directa de la mujer en las maacutes diversas actividades sociales y cul-turales Esta participacioacuten llegoacute incluso al extremo de algunas mujeres que insultaron li-teralmente a las autoridades competentes cuando lo creyeron necesario laquoEstas mujeres que lloran seriacutean las mismas que creyeron como causa principal de aquellas muertes las disposiciones de las Leyes Nuevas porque no tuvieron empacho de insultar al virrey Blasco Nuacutentildeez Vela a quien lsquodieron gritasrsquo (sic) las espantildeolas y lo maldijeron como si llevara consigo la ira de Diosraquo (Borges 52) Lo mismo ocurre en la peniacutensula Dentro del plano cultural durante la primera mitad del siglo XVII destacaraacute entre los escritores de su tiempo Mariacutea de Zayas y Sotomayor gran novelista y defensora de los atributos de su sexo cuya obra narrativa y dramaacutetica disfrutoacute de una gran popularidad en la peniacuten-sula asiacute como en Hispano-Ameacuterica laquoCasi no ha habido novelista maacutes simpaacutetico a los lectores espantildeoles que Dontildea Mariacutea de Zayas seguacuten las muchas reimpresiones que se han hecho de sus obrasraquo (E Fernaacutendez de Navarrete xcvii) Entre sus admiradores contoacute

140 JUAN FRANCISCO MAURA

con el infatigable y genial Lope de Vega que la elogioacute en su obra El laurel de Apolo laquoNo desaprovechoacute Dontildea Mariacutea ninguna ocasioacuten de abogar por las mujeres contra la tiraniacutea de los hombres suponiendo que como deacutespotas las quieren ignorantes para tenerlas sujetasraquo (E Fernaacutendez de Navarrete xcvi)

Pero no tiene que ser exclusivamente una mujer la que defienda los atributos y los derechos de su sexo Se podriacutean citar varios ejemplos donde desde los inicios de las letras espantildeolas la mujer aparece comprendida e incluso defendida por escritores con-temporaacuteneos Veacuteanse los siguientes versos escritos en el siglo XIV por el genial Arcipres-te de Hita

Mujeres abrid los oiacutedos y escuchad una buena leccioacuten escuchad estas palabras guardaos del varoacuteniexclGuardaos no os acaezca como el leoacutenal asno sin orejas y sin su corazoacuten(892)133

No se puede despreciar la influencia que tuvo en la Espantildea del siglo XVI Erasmo de Roacutetterdam el intelectual maacutes reputado de su tiempo Erasmo con una clarividencia mental poco comuacuten trata de los temas maacutes cotidianos asiacute como de los maacutes profun-dos Sus escritos siempre al borde de lo hereacutetico dejaron bien claro su independencia ideoloacutegica Tambieacuten supo dar su opinioacuten sobre las mujeres y de la importancia que una buena educacioacuten supondriacutea a la hora de llevar a cabo las tareas diarias

With regard to female education Erasmus is unequivocal In Abbatis et eruditae he categorically states that education and learning are as desirable in a woman as in a man And although there is naturally no suggestion that the education and learning should be directed towards a career there are no carping restrictions as to what the education should consist of or where the learning should end (McKendrick 9)

Fue una mujer en particular la que llamoacute la atencioacuten del erudito holandeacutes Catalina de Aragoacuten hija de Isabel la Catoacutelica Grandes debieron ser las virtudes de esta dama cuando tan renombrados laquolibrepensadoresraquo la calificaban como laquomilagro del aprendi-zaje femeninoraquo

At the centre of the movement was a Spanish woman Catherine of Aragon first wife of Henry VIII of England Her mother Isabel la Catoacutelica had made sure that Catherine and her sisters received an advanced and enlightened education under two eminent Italian hu-manists Antonio and Alessandro Geraldini and Catherine herself was considered by Erasmus and Sir Thomas Moore to be a miracle of fe-male learning At her request Juan Luis Vives between 1524 and 1528 wrote his De institutione feminae christianae for her daughter Mary and he dedicated it to Catherine (McKendrick 6)

La pobre Catalina ya presagiaba su triste final Existe una dramaacutetica y muy poco co-nocida carta conservada en la Academia de la Historia donde eacutesta escribe a su sobrino el emperador Carlos V pidieacutendole ayuda y proteccioacuten a su desesperada situacioacuten en Inglaterra

133 Juan Ruiz Libro de Buen Amor 193

141ESPANtildeOLAS DE ULTRAMAR EN LA HISTORIA Y EN LA LITERATURA

Muy alto y poderoso sentildeor por las letras que a vuestra magestad e escrito a visto el tenor que siempre en este my negocio e tenido agora que veo el peligro que tanto tiempo lo e esperado torno a suplicar lo mismo que asta agora e echo y es que por permisioacuten de dios y por el deudo y sangre que entre vuestra magestad y my ay quiero de vos es-pecial memoria del peligro en que estoy y de los ynconvenientes que se espera allende que dios muy grande mire para ofendido si el Rey my sentildeor pone en efecto lo que todo este reyno tome en este parlamento de todo lo que para estar informado vuestra magestad por su embaxa-dor que aquiacute reside para el remedio tengo esperanza en dios bastaraacute lo que vuestra alteza proveeraacute conque se aga con tiempo no tengo maacutes que decir sino que todo ese reyno y maacutes los perlados y doctas personas que en esta causa defienden estaacuten muy sentidos de la dilacioacuten que su santidad del papa en este negocio a dado y quexanse mucho dello pues por vuestra parte nunca sino justicia se le a demandado y estaacuten el diacutea de oy tan firmes como asta agora para averlo de declarar donde fueren y debe ser entyendese esto poniendo la question como puacuteblicamente se platica que para en lo secreto no ay necesidad de ablar en ello y crea vuestra magestad de que esta verdad y dios me sostienen porque para proseguir mis trabajos no vastaraacute cuerpo humano y confiando en eacutel le suplico guarde la vida de vuestra magestad y acreciente su estado como yo deseo Degramache a 11 de enero= Humilde tiacutea de vuestra magestad= Catalina (RAH Atoacutegrafo precioso Caja 3 Nuacutem 23 Dontildea Catalina de Aragoacuten Reina de Inglaterra Antildeo 1530 Carta al emperador Carlos V pidieacutendole proteccioacuten)

La pobre Catalina presagiaba su triste fin ya que seis antildeos despueacutes la que fuera hija menor de los Reyes Catoacutelicos pasariacutea a mejor vida El no haber podido dar un hijo he-redero al rey Enrique VIII hizo que eacuteste se casase con Ana Bolena declarando nulo su matrimonio anterior sin consentimiento del Papa Roma le excomulgoacute pero eacutel mismo se proclamoacute jefe de la iglesia anglicana A pesar de todo Catalina muere enamorada de su marido y estas uacuteltimas liacuteneas con las que termina su uacuteltima carta y su vida son sufi-cientemente expliacutecitas laquoJuro que sobre todas las cosas mis ojos desean volver a verosraquo (Ximeacutenez de Sandoval 131)

Pese a la enorme influencia directa o indirecta que Erasmo tuviese sobre los pensado-res de la Espantildea del siglo XVI no debemos dejar de destacar tambieacuten la de Fray Luis de Leoacuten tanto por su cariz independiente como por ser un defensor de la libertad indivi-dual Auacuten siendo un representante de la iglesia Catoacutelica tuvo como se sabe que sufrir sus criacuteticas y el rechazo a la exposicioacuten de sus ideas escritos y traducciones biacuteblicas Fray Luis en su obra La perfecta casada deja clara su idea sobre la mujer y la funcioacuten que eacutesta debiacutea ocupar en la sociedad que le tocoacute vivir Para Fray Luis la mujer no era una imagen idealizada del laquoamor corteacutesraquo como la de los escritores neoplatoacutenicos sino un ser de carne y hueso con derechos y responsabilidades en la sociedad de igual manera que el hombre (McKendric 10)

Seriacutea exagerado afirmar que Fray Luis de Leoacuten pone a la mujer por encima del hom-bre en el contexto social Sin embargo y siempre teniendo en cuenta las limitaciones a

142 JUAN FRANCISCO MAURA

las que su profesioacuten y su tiempo le obligaban procura dejar claro que la mujer (casada) merece todo el respeto y ayuda que sea posible de su marido

Porque aunque es verdad que la naturaleza y estado pone obligacioacuten en la casada como decimos de mirar por su casa y de alegrar y des-cuidar continuamente a su marido de la cual ninguna mala condicioacuten de eacutel la desobliga pero no por eso han de pensar que ellos tienen licencia para serles leones y para hacerlas esclavas antes como en todo lo de-maacutes es la cabeza el hombre asiacute todo este trato amoroso y honroso ha de ser principio del marido Porque ha de entender que es compantildeera suya o por mejor decir parte de su cuerpo (Fray Luis de Leoacuten 21 cap 3)

En el reciente estudio de Mar Martiacutenez Goacutengora Discursos sobre la mujer en el Huma-nismo renacentista espantildeol se presenta esa posicioacuten ambigua del fraile agustino en refe-rencia a la funcioacuten de la mujer en la sociedad renacentista

Fray Luis se opone a la funcioacuten otorgada en la eacutepoca a la mujer de mera imagen pasiva Sin embargo fray Luis totalmente encardinado en la cultura del Renacimiento es consciente de la imposibilidad de ignorar ciertos presupuestos De ahiacute la frecuencia en la que el autor anima a las mujeres a buscar una laquofamaraquo puacuteblica que soacutelo una voz masculina puede proveerles Si la mujer desempentildea perfectamente su funcioacuten de casada el marido recibiraacute honra haciendo posible para ella ser alabada por los miembros de la comunidad (187)

Ya se ha mencionado a Isabel la Catoacutelica como impulsora de toda la empresa ultra-marina pero es precisamente gracias a su influencia cuando se pone de moda entre di-versas damas de su tiempo mdashsiglos XV y XVImdash la praacutectica de ciertos estudios y ciencias Beatriz Galindo conocida popularmente como laquoLa latinaraquo fue la que ensentildeoacute latiacuten a la reina Isabel Dice Juliaacuten Juderiacuteas en su obra La Leyenda Negra laquoA los hombres se unen las mujeres en este afaacuten de saber y vemos a Dontildea Beatriz Galindo maestra de latiacuten de la Reina a dontildea Luciacutea de Medrano que explicoacute los claacutesicos en Salamanca a dontildea Fran-cisca de Lebrija que desempentildeoacute una caacutetedra de retoacuterica en la Universidad de Alcalaacuteraquo (Juderiacuteas 74)

Nos cuenta Eustaquio Fernaacutendez de Navarrete que a la muerte del ceacutelebre Antonio de Nebrija quien a impulsos de la reina catoacutelica publicase la primera gramaacutetica europea en lengua romance su hija Antonia le supliacutea en las clases de filosofiacutea y retoacuterica en la Uni-versidad de Alcalaacute cuando eacuteste se encontraba ya viejo y enfermo (xcvi)

No existe ninguna razoacuten para pensar que las las mujeres de clases maacutes favorecidas que pasaron al Nuevo Mundo no disfrutaran de los mismos beneficios y libertades que sus homoacutelogas peninsulares Seraacute preciacutesamente uno de los hijos del mismo Antonio de Nebrija el doctor Sancho de Lebrija quien se encargue de dar poder a Antoacuten Pareja sastre para que la obra escrita de su padre tanto en latiacuten como en romance se distri-buya y venda laquoasiacute en Indias como en otras partesraquo (AHPS Libro del antildeo 1536 Oficio IV Fragmento de un libro Escribaniacutea Cristoacutebal Becerra Folio Primer tercio del legajo Fe-cha 31 de diciembre) En cuanto a las clases menos favorecidas la monarquiacutea espantildeola se preocupoacute desde un primer momento de alfabetizar a todos sus suacutebditos hembras y varones incluyendo los naturales de los territorios conquistados

143ESPANtildeOLAS DE ULTRAMAR EN LA HISTORIA Y EN LA LITERATURA

La educacioacuten de los indiacutegenas americanos fue una sincera preocupa-cioacuten de los reyes de Espantildea casi desde el descubrimiento del Nuevo Mundo Entre las primeras instrucciones de los Reyes Catoacutelicos a sus gobernadores de las Islas Antillas figuran las dadas a Nicolaacutes de Ovan-do en 1503 ordenaacutendole levantar en cada pueblo una escuela junto a la iglesia laquoen la que todos los nintildeos que hubiere en cada una de dichas poblaciones se junten dos veces al diacutea para que alliacute el capellaacuten les ensentildee a leer y a escribirraquo (Vega 9-10)

En la obra renacentista de Cristoacutebal de Villaloacuten El Crotaloacuten se ofrecen unas imaacutegenes muy graacuteficas de las mujeres de la eacutepoca y del laquoexceso de libertadraquo que seguacuten el autor en boca de uno de sus personajes disfrutaban Desde el punto de vista antropoloacutegico y social las siguientes liacuteneas ofrecen una buena imagen de la apariencia fiacutesica de las mujeres de su tiempo y de su actitud vista desde la perspectiva parcial del personaje de la obra

Pues aun no pienses Demophon que la vanidad y perdicioacuten destas livianas mujeres se le ha de pasar a Dios sin castigo que yo te oso afirmar por cosa muy cierta y que no faltaraacute Que por ver Dios su disolucioacuten desenvoltura desverguumlenza y poco recogimiento que en ellas en este tiempo hay visto que asiacute viacutergenes como casadas viudas y solteras todas por un comuacuten viven muy suelta y muy disolutas en su mirar andar y meneo muy curiosas y que por la calle van con un cu-rioso paso en su andar descubierta su cabeza y cabello con grandes y deshonestas crenchas muy alto y estirado el cuello guintildeando con los ojos a todos cuantos topan haciendo con sus cuerpos lascivos meneos (Villaloacuten 860-61 vol 2 canto 20)

El pasaje antes citado pese a parecer humoriacutestico en nuestros diacuteas no lo era tanto en la eacutepoca en que fue escrito ya que la visioacuten de la mujer como parte integrante del pa-trimonio del padre o del marido podiacutea de alguna manera poner en juego laquola honraraquo de su posesor Pese a esto se aprecia como la mujer teniacutea cierto margen de libertad que no se limitaba a las caacutemaras de un convento o a una vida totalmente alejada del mundanal ruido En la siguiente cita continuacioacuten de la anterior se puede observar la serie de ac-cesorios y aderezos que las mujeres de la eacutepoca utilizaban en sus vestidos y cuerpos llamando la atencioacuten la complejidad y sofisticacioacuten de los atuendos descritos

Por esta su comuacuten deshonestidad se cierto que vendraacute tiempo en el cual ha de hacer Dios un gran castigo en ellas pelarse han todos sus cabellos hacieacutendolas a todas calvas y seraacute tiempo en que les quitaraacute Dios todos sus joyeles sortijas manillas zarcillos collares ajorcas y apretadores de cabeza Quitarles ha los partidores de crenchas tenaci-cas salsericas redomillas y platericos de colores y todo geacutenero de afei-tes sahumerios guantes adobados sebos y unturas de manos y otros olores Alfileres agujas prendedores Quitarles ha las camisas muy del-gadas y los manteos vasquintildeas briales saboyanas nazarenas y rebo-cinos y en lugar de aquellos sus cabellos encrespados y enrifados les daraacute pelambre y calvez y en lugar de aquellos apretadores y joyeles

144 JUAN FRANCISCO MAURA

que les cuelgan de la frente les daraacute dolor de cabeza y por cinta de ca-deras de oro muy esmaltadas y labradas les daraacute sogas de muy aacutespero esparto con que se cintildean y aprieten y por aquellos sus muy curiosos y suntuosos ataviacuteos de su cuerpo les daraacute siacutelici y desta manera haraacute Dios que lloren su lascivia y desorden y que de su lujuria y deshonestidad hagan grave penitencia Entonces no habraacute quien las quiera por su he-diondez y miseria en tanto que siete mujeres se encomendaran a un varoacuten y eacutel de todas huiraacute menospreciaacutendolas y aborrecieacutendolas como de gran mal (Villaloacuten 860-61 vol 2 canto 20)

Excelente lista de aderezos femeninos de los cuales pocos son reconocibles en nues-tros diacuteas Gran frustracioacuten debiacutea de tener con las mujeres el autor de estas liacuteneas sien-do al parecer muy poco correspondido por estas uacuteltimas La misoginia que aparece en estas liacuteneas refleja cierta ingenuidad La mujer que se nos presenta debioacute de ser bastante atractiva y sofisticada portando una gran variedad de adornos muchos de ellos de origen oriental y de perfumes que poco tendriacutean que envidiar a los de la mujer moderna En Descripcioacuten breve de toda la tierra del Peruacute Tucumaacuten Riacuteo de la Plata y Chile obra escrita en Chile entre 1603 y 1609 por el padre Reginaldo de Lizarraga nacido en Medelliacuten (Espantildea) en 1545 y trasladado a Ameacuterica a los quince antildeos vemos una asombrosa semejanza con la cita anterior En esta obra del padre dominico dedicada al entonces presidente del Consejo de Indias conde de Lemos observamos coacutemo su descripcioacuten de la vestimenta de las mujeres de Lima ofrece notables semejanzas con la escrita unos antildeos antes en Espantildea En su capiacutetulo 51 titulado laquoDe los vestidos de las mujeresraquo dice lo siguiente

Lo que en esta ciudad [Lima] se admira mucho y aun lo que se ha-biacutea de refrenar es los vestidos y trajes de las mujeres son en esto tan costosas que casi no se sabe como lo pueden sufrir sus maridos La soberbia de ellas es demasiada y no sabemos en lo que han de venir a parar plegue a Dios y no sea en lo que pararon aquellas de quien dice Nuestro Sentildeor Porque las hijas de Sioacuten se ensoberbecieron (esto es las ciudadanas) cuando saliacutean de sus casas llevaban las gargantas ex-tendidas los ojos altos a una y otra parte guintildeaacutendolos los pasos muy compuestos el Sentildeor las volveraacute calvas y les raeraacute los cabellos de sus cabezas les quitaraacute sus chapines y jerbillas bordadas las medias lunas rodetes las cadenas y collares de oro las ajorcas los tocados costosos los punzones de oro para partir las crenchas los zarcillos y los olores los anillos y piedras preciosas etc y por los olores seles daraacute muy pes-tilencial olor y por las cintas de oro sogas de esparto etc No creo yo hay en lo descubierto del mundo ciudad en su tanto ni cuatro veces mayor que a tanta soberbia en este particular como esta nuestra ciu-dad [Lima] llegue acueacuterdome que los antildeos pasados maacutes ha de treinta y ocho que llegando un religioso nuestro de Espantildea nacido y criado en Toledo a nuestro convento de esta ciudad cerca de la fiesta de Cor-pus Christi tratando de ella y de la suntuosidad majestad y riqueza que aquel diacutea en Toledo en calles y ventanas se mostraba le deciacuteamos que no nos espantase porque en nuestra ciudad veriacutea coacutemo no le ha-

145ESPANtildeOLAS DE ULTRAMAR EN LA HISTORIA Y EN LA LITERATURA

ciacutea mucha ventaja Toledo Llegoacute la fiesta vio la riqueza que se mostroacute en los vestidos de las mujeres adornos de ventanas altares y calles dijo que la riqueza de Toledo en este diacutea mostrada no haciacutea muchas ventajas a la de esta ciudad Pues es cierto que hay tanta diferencia de entonces ahora en lo que vamos tratando como de vestidos de aldea a vestidos de corte con justo tiacutetulo se podriacutea moderar por los virreyes esta soberbia pero no seacute por queacute no se modera y siacute seacute por queacute ni los maridos no tienen aacutenimo para moderarlo ni los gobernadores tampo-co (Lizarraga 38 lib 1 cap 51)

Seriacutea injusto y exagerado afirmar que los descubrimientos transoceaacutenicos se hicieron por la presioacuten que ejercieron las mujeres sobre sus amantes para que estos les trajesen laquomaacutes raacutepidamenteraquo todo ese laquosin finraquo de delicadezas exoacuteticas de todo tipo que existiacutean en el Oriente Lo que siacute es cierto es que las mujeres fueron grandes consumidoras de perfumes afeites sedas joyas y otros bienes suntuarios siendo muy conscientes de lo que hoy entendemos como laquomodaraquo Martiacuten Fernaacutendez de Navarrete en su indispensa-ble trabajo sobre los primeros viajes transoceaacutenicos Coleccioacuten de los viajes y descubrimien-tos menciona de paso la situacioacuten de algunas mujeres durante el siglo XV Es precisa-mente esta eacutepoca en la cual portugueses y castellanos entran en conflicto por el control de algunas posesiones en las costas africanas

y crecioacute el lujo a tal extremo que aun las mujeres de los menestrales y artesanos se confundiacutean en los vestidos con las de alto linaje y esta-do usando ropas de ricas telas de seda de oro de lana con forros de martas y pieles y con guarniciones de oro plata y aljoacutefar cuyo gasto por ser ruina de las familias se tratoacute de corregir aunque sin efecto en las Cortes de Palenzuela (M Fernaacutendez de Navarrete 75 21)

El mismo autor resalta la importancia que tuvo para el comercio de Castilla el contar con una buena armada que protegiese a los barcos de piratas y otros peligros Gracias a los inventarios que se han conservado del duque de Beacutejar y de don Alvaro de Zuacutentildeiga conocemos el lujo de estos sentildeores en perlas orientales piedras preciosas telas y demaacutes utensilios de gran valor134 Existe una Real Pragmaacutetica de Fernando el Catoacutelico a Diego Coloacuten en donde aparece nuevamente la conciencia que se teniacutea sobre la manera de ves-tir que deberiacutean llevar las damas castellanas

R PRAGMAacuteTICA SOBRE EL VESTIR Y GASTAR SEDA EN LAS IN-DIAS Valladolid 12 de noviembre de 1509 Don Fernando etc A vos Don Diego Coloacuten nuestro Almirante y Gobernador de las Indias del mar Oceacuteano y a otro cualquier mi Gobernador etc Sepades que yo he sido informado de los muchos gastos y costas que se han hecho y facen y se esperan hacer si yo no lo mando proveer y remediar en el vestir y gastar de las sedas y brocados y bordados en la Isla Espantildeola y en las otras islas y poblaciones de las dichas islas del mar Oceacuteano tra-yendo en ello mucho desorden y yo por el amor y voluntad que tengo

134 AGI Indiferente 418 Libro 2 fol 87v Publicada en DH Am Tom 6 paacutegina 191 DIA Tomo 31 pag 470 DIU Tomo 5 paacuteg 166 Seguacuten la RC a Diego Coloacuten fechada a 14 de noviembre de 1509 es la pragmaacute-tica que se guarda en Castilla sobre la manera de vestir (DIU Tomo 5 paacutegina 174)

146 JUAN FRANCISCO MAURA

a esas dichas Indias y a los pobladores dellas y porque deseo que ellas se aumenten y acrecienten por las haber ganado y descubierto por la gracia de Nuestro Sentildeor con nuestra industria trabajo y costa y los po-bladores dellas no hagan sobre lo suso dicho tan excesivos gastos sino pues que van a ellas con deseo y voluntad de se ayudar y aprovechar del oro que por gracia de Nuestro Sentildeor se descubre de cada diacutea se detengan en lo gastar en semejantes cosas para se aprovechar dellos en otras cosas que maacutes les convenga asiacute para sus personas como para sus haciendas y por evitar y excusar lo suso dicho mandeacute lo platicar con algunos de mi Consejo y por ellos visto se halloacute que porque nuestros suacutebditos y naturales que viven y estaacuten en dichas Indias no gasten sus haciendas en semejantes desoacuterdenes y que las conserven y guarden pa-ra sus menesteres y por el bien y el pro comuacuten de todos generalmente mando dar esta mi carta premaacutetica sancioacuten la cual quiero y mando que haya fuerza y vigor de ley bien ansiacute y a tan cumplidamente como si fuese fecha y promulgada en Cortes por lo cual ordeno y mando que en cuanto a mi merced y voluntad fuere ninguna ni algunas personas de cualquier ley estado condicioacuten que sean que estuvieren de morada o vivienda o en otra cualquier manera en la dicha Isla Espantildeola y en las otras islas desas dichas Indias y tierra firme no puedan traer y traigan ropa alguna de brocado ni de seda ni de chamelote de seda ni zarzahaacuten ni tercenel ni tafetaacuten ni vainas ni correas de espada ni en cinchas ni en sillas ni en alcorques ni en cosa alguna ni tampoco puedan traer ni trai-gan bordados de seda ni chapado de plata ni de oro de martillo ni fila-do ni tejido ni de otra cualquier manera pero que las personas que tu-vieren en las dichas Indias bienes asiacute muebles como raiacuteces que valgan hasta la cuantiacutea de mil castellanos que ellos y los hijos que tuvieren de hasta edad de catorce antildeos traigan jubones y caperuzas y bolsas y ribe-tes y pestantildeas de seda de cualquier color que quisieren con tanto que en una ropa no traigan maacutes de un ribete y que no haya en los dichos ribetes y pestantildeas maacutes anchura de cuanto un dedo pulgar y que no se traiga en los ruedos de las ropas y que puedan traer becas de tercenel y de tafetaacuten y de papahigos de camino aforrados en el mismo tercenel y tafetaacuten y ansiacute mismo permitimos que puedan traer de seda las cora-zas y guarnecer las faldas y gocetes y capacetes y baberas y quejotes y traer cojines de seda en la silla de la jineta y que las mujeres de las tales personas que tuviesen bienes en la dicha cuantiacutea de los dichos mil castellanos y sus hijas siendo doncellas puedan traer gonetes y corseacutes y fajas de dos varas de largo de seda y [borradas dos letras por mancha de tinta] mas y de lo de vestir y mudar cuando quisieren y por bien tuvieren quier sea moyil o faldilla o cota o haacutebito u otra cualquier ropa con tanto que juntamente no puedan vestir ni vistan maacutes de una ni les pongan trepas ni tiras de seda ni de brocado ni de oro tirado ni tejido ni relido ni en las ropas de pantildeo pongan cortapisas ni lisonjas ni trepas ni tiras ni otra guarnicioacuten alguna de seda ni de brocado salvo que puedan traer un ribete o pestantildea de seda de anchura de un dedo pulgar asiacute en

147ESPANtildeOLAS DE ULTRAMAR EN LA HISTORIA Y EN LA LITERATURA

las ropas de seda como en las de pantildeo en los ruedos de las faldas y para las costuras y no otra cosa alguna y que no traigan la dicha seda en las guarniciones de las mulas ni en angarillas ni en sillas ni en pantildeos ni en otra cosa alguna y que ansiacute mismo no puedan traer mantillas de seda ni enforradas en seda sopena que l que contrario hiciere pierda las ro-pas que ansiacute trujere vestidas por primera vez y sea repartido la mitad para el juez que lo juzgare y la otra mitad para el juez que lo acusare y por la segunda que pierda la ropa y se parta como dicho es y sean desterrados de la isla donde viviere para dos antildeos y por cuanto algu-nas personas de los que nuevamente destos reinos de Castillaa van a se avecindar y poblar y estar en las dichas Indias y son de honra acae-ce que no llevan tantos bienes que valgan la dicha cuantiacutea de los mil castellanos que mando que tengan los que hubieren de traer seda en la manera que dicha es que a eacutestos tales no se entienda y extienda lo suso dicho y que puedan traer la dicha seda seguacuten y en la manera que dicha es y no maacutes hasta tanto que haya un antildeo que estaacuten en las dichas Indias que corra y se cuente desde el diacutea que llegare fasta ser cumplido y que siacute cumplido no tuviere bienes que valgan la dicha cuantiacutea de los dichos mil castellanos que no puedan traer seda ninguna so la dicha pena de suso contenida la cual mando a vos las dichas nuestras justi-cias y a cada una de vos que esta mi carta y todo lo en ella contenido y cada cosa y parte dello guardeacuteis y cumplaacuteis y ejecuteacuteis por manera que se cumpla y ejecute lo en ella contenido so pena de perdimiento de los oficios y que seades inhaacutebiles para haber otros semejantes y que pagueis la estimacioacuten de la tal ropa que dejardes de ejecutar y para que lo susodicho sea notorio y ninguno dello pueda pretender ignorancia mando que esta mi carta sea pregonada puacuteblicamente por las plazas y mercados y otros lugares acostumbrados desas dichas islas por prego-nero y ante escribano puacuteblico(Konetzke Coleccioacuten 23)135

Tambieacuten se sabe de las joyas que Rodrigo Ponce de Leoacuten marqueacutes de Caacutediz debioacute dar a dontildea Beatriz Pacheco (M Fernaacutendez de Navarrete 75 22) Lo que siacute queda claro es que la navegacioacuten seraacute a partir de estos antildeos la forma maacutes raacutepida e importante para comerciar con aquellos paiacuteses de Oriente que antes soacutelo era posible alcanzar a traveacutes de rutas terrestres Existe un documento muy representativo de este periodo sobre la posesioacuten de joyas de gran valor por parte de miembros de una de las familias maacutes repre-sentativas residentes en Ameacuterica Los protagonistas son en este caso el almirante Diego Coloacuten y su mujer Mariacutea de Toledo Dice el documento que El jurado Antoacuten Bernal y Juana de Hoces su mujer vecinos de Sevilla en la collacioacuten de Santa Cruz reciben de Diego Coloacuten Almirante de las Indias laquoun joyel muy rico de oro de hechura de escudo que tiene en medio una piedra preciosa grande esmeralda e debaxo de la dicha piedra un rostro de aacutengel labrado en el mismo oro esmaltado e a cada lado del dicho rostro una piedra preciosa diamante pura y debaxo una piedra gruesa pendiente que pesa el dicho

135 AGI Indiferente 418 Libro 2 fol 87v Publicada en DH Am Tom 6 paacutegina 191 DIA Tomo 31 pag 470 DIU Tomo 5 paacuteg 166 Seguacuten la RC a Diego Coloacuten fechada a 14 de noviembre de 1509 es la pragmaacutetica que se guarda en Castilla sobre la manera de vestir (DIU Tomo 5 paacutegina 174)

148 JUAN FRANCISCO MAURA

joyel con todo lo susodicho medio marcoraquo Los citados Antoacuten Bernal y su esposa se dan por pagados de todo lo que se les adeudaba y se obligan a su vez a devolver el joyel al Almirante si este les paga en dinero El 23 de agosto de 1530 siete antildeos despueacutes la virreina canceloacute la anterior obligacioacuten y recuperoacute el mencionado joyel (AHPS Libro del antildeo 1523 Oficio I Escribaniacutea Alonso de la Barrera Folio 1173 Fecha 3 de diciembre) En la misma casa del almirante otra mujer Briolanga Muntildeiz su tiacutea materna se obliga a pagar al mercader genoveacutes Batista Catantildeo 22 ducados de oro laquopor cierto raso que le comproacute y habiacutea de ser pagado en el puerto de Santo Domingoraquo (AHPS Libro del antildeo 1509 Oficio V Libro uacutenico Escribaniacutea Francisco Esquibel Folio Primer tercio del lega-jo Fecha 9 de marzo) Dontildea Briolanga recibiacutea cada antildeo para su mantenimiento 100000 maravediacutes del almirante mayor de las Indias por medio de Gaspar Gurricio monje del monasterio de Santa Mariacutea de las Cuevas (AHPS Libro 1510 Oficio XV Libro II Es-cribaniacutea Bernal Gonzaacutelez Vallesillo Folio primer tercio del legajo Fecha 4 de julio) Resulta interesante hacer notar la temprana presencia (1516) de un ingleacutes en Santo Domingo involucrado igualmente en la compra de telas Se trata de laquoNicolas Arnoteraquo residente en Santo Domingo que debe pagar a Mariacutea Caldera mujer del comendador Diego Barbosa el valor de una cama de sargas de colores de Flandes (AHPS Libro del antildeo 1516 Oficio XV Libro II Escribaniacutea Bernal Gonzaacutelez Vallesillo Folio Primer tercio del legajo Fecha 28 de agosto) Sin embargo anteriormente a esa fecha (1514) encontramos a un veneciano casado con una inglesa mucho maacutes ceacutelebre en sus viajes trasoceaacutenicos laquoSevastiaacuten Cavotoraquo capitaacuten del rey don Fernando y vecino de Sevilla136

De forma paralela se observa tambieacuten un cierto desenvolvimiento de la mujer en su medio lo que equivaliacutea a intercambios de informacioacuten a todos los niveles incluyendo por lo tanto el cultural No era extrantildeo que tuviesen libros de comedias a mano y que llegasen incluso a escribir comedias ellas mismas Efectivamente la sospecha de que las damas llegasen a escribir comedias estaba bien fundada Veacuteanse algunos ejemplos Ana Caro Malleacuten de Soto una de las maacutes famosas dramaturgas de la Sevilla del siglo XVII autora de El conde de Partinupleacutes utiliza el tema del amor en sus maacutes diversas variantes fiacutesicas y espirituales como el eje de casi todas sus obras (Perry 57) Este hecho por otra parte indica el favor del puacuteblico ante un tema tan popular Veacutease otro ejemplo

The drama of this period did not present love and marriage as a simple partnership however and many dramatists contrasted laquoprofaneraquo with laquohonestraquo love Feliciana Enriacutequez de Guzmaacuten who wrote Tragicome-dia Los jardines y campos sabeos in Seville in the early seventeenth cen-tury presented the hero Clarisel as the victim of laquopervertedraquo and fickle Belidiana in part 1 so blinded by her beauty that he feels himself laquoin shackles and in chainsraquo (Perry 57)

Pero las damas espantildeolas de esta eacutepoca no soacutelo escribiacutean comedias algunas tambieacuten se aventuraron a escribir tratados cientiacuteficos Uno de estos casos fue el de Oliva Sabu-co de Nantes Barrera que a finales del siglo xvi escribioacute un tratado meacutedico sobre la naturaleza humana advirtiendo que la lujuria podiacutea perjudicar al cuerpo Se basaba en

136 Sebastiaacuten Caboto o laquoSevastiaacuten Cavotoraquo estaba casado con Juana Cavoto vecina que fue de la ciudad de Londres en la parroquia de San Gil (AHPS Libro del antildeo 1514 Oficio I Libro II Escribaniacutea Mateo de la Cuadra Folio 253 Fecha 14 de Septiembre) citado en CFAAPS Vol 3 doc 128 p 37

149ESPANtildeOLAS DE ULTRAMAR EN LA HISTORIA Y EN LA LITERATURA

la presuncioacuten de que la lujuria provocaba que el cerebro emitiese un liacutequido que iba al estoacutemago enfriaacutendolo y debilitaacutendolo interrumpiendo de esta manera las funciones vitales (Perry 58)

Se sabe que en la eacutepoca de Isabel la Catoacutelica habiacutea muchas mujeres estudiantes y que la propia reina las impulsaba a estos menesteres iniciativa que obtuvo sus frutos en las deacutecadas siguientes Ademaacutes de las conocidas novelistas Mariacutea de Zayas y Sotomayor y dontildea Mariana de Carvajal existioacute toda una serie de escritoras de todos los geacuteneros lite-rarios que florecieron a ambos lados del Atlaacutentico y que no solamente llaman la aten-cioacuten por su nuacutemero sino por la calidad de sus obras Algunas de ellas como dontildea Luisa de Padilla condesa de Aranda calificada por Serrano y Sanz como laquola maacutes notable de cuantas florecieron en Espantildea en el siglo XVIIraquo personificaraacuten a la perfeccioacuten a este tipo de mujeres Tambieacuten deberiacuteamos saber cuaacutentas seriacutean las mujeres que escribieron con pseudoacutenimos masculinos

La informacioacuten sobre las diferentes facetas de la vida femenil con que contamos no es abundante A pesar de todo podemos hacernos una idea maacutes clara de la verdadera situacioacuten de la mujer a traveacutes de una nueva interpretacioacuten de los textos tanto de los medievales como de las croacutenicas de los primeros antildeos del descubrimiento y conquista Algunos estudios relativamente recientes surgidos por el intereacutes general que suscita todo lo concerniente a la mujer han ayudado a considerar nuevas perspectivas La eru-dicioacuten moderna estaacute poniendo en tela de jucio los estereotipos tradicionales en cuanto a la pasividad y relevancia femeninas asiacute como al tradicional misogenismo que se atri-buye a la eacutepoca medieval Cada vez estaacute maacutes claro que la existencia de estas mujeres variaba considerablemente seguacuten la eacutepoca posicioacuten social o situacioacuten geograacutefica por lo que hacer valoraciones categoacutericas sobre laquola situacioacuten de la mujerraquo puede llevar a graves equivocaciones (Dillard 9) Es fundamental para comprender a la mujer espa-ntildeola que pasoacute al Nuevo Mundo tener en cuenta las enormes diferencias de todo tipo que existieron en la sociedad castellana y novomundista Un pintoresco ejemplo es el de laquolas tapadasraquo una usanza de origen aacuterabe que se pondriacutea de moda en Castilla poco despueacutes de la toma de Granada por los Reyes Catoacutelicos y que despueacutes pasariacutea al Peruacute Esta tradicioacuten ha perdurado en algunos pueblos de Espantildea hasta relativamente poco tiempo pueblos como Mojaacutecar (Almeriacutea) y Vejer de la Frontera (Caacutediz) son ejemplo de esta costumbre tambieacuten conocida como el de las laquocobijaacutesraquo

Tras la caiacuteda del reino musulmaacuten de Granada en 1492 la corona espa-ntildeola prohibioacute a las mujeres aacuterabes de Andaluciacutea vestir los velos islaacutemi-cos que cubriacutean sus rostros y ocultaban su identidad No era faacutecil des-arraigar esta costumbre tan ancestral y secular y el emperador Carlos asiacute como su hijo el rey Felipe II tuvieron que repetir la prohibicioacuten Cuando finalmente las moras fueron obligadas a abandonar sus velos y a adoptar el chal castellano comenzaron a utilizar la nueva prenda para cubrir sus rostros dejando al descubierto soacutelo uno de los ojos Esta nueva moda en el uso del chal tradicional nos asegura leoacuten Pi-nelo era extremadamente graciosa sensual y atractiva a causa de la belleza exoacutetica de los ojos de las moras Las mujeres cristianas de Granada Coacuterdoba y Sevilla imitaron pronto la nueva moda de llevar el chal y asiacute nacioacute la laquotapadaraquo hispana Desde Sevilla la nueva moda

150 JUAN FRANCISCO MAURA

fue a las colonias de ultramar y tomoacute raices especialmente en el Peruacute (Martiacuten 317-18)

En un reciente estudio sobre la educacioacuten de la mujer en la Ameacuterica virreinal apare-cen algunos ejemplos significativos de mujeres espantildeolas que consagraron gran parte de sus vidas a la tarea docente Dentro del proceso educativo de las espantildeolas que fueron a las Indias destaca el papel de dontildea Catalina de Bustamante Joseacute de Jesuacutes Vega y Ma-riacutea Luisa Caacuterdenas de Vega dicen en su obra Ameacuterica Virreinal La Educacioacuten de la mujer que esta mujer pocos antildeos despueacutes del descubrimiento del Nuevo Mundo se dedicoacute a trabajar en favor de los indios aunque por desgracia su nombre y sus hechos en la labor docente hayan sido ignorados por los historiadores modernos (Vega 12-13)

Son varias las veces que se nombra a Catalina de Bustamante en el citado estudio y varias las fuentes antiguas en que se recoge la presencia de tan distinguida laquomatrona muy honrada y de buen ejemploraquo de la que ya hablaba Zumaacuterraga y sobre la que se hizo un informe enviado a Carlos V describiendo sus actividades en la Nueva Espantildea firmado por cuatro de los misioneros maacutes conocidos de Meacutexico

El informe dice que los franciscanos de Texcoco acababan de cons-truir un nuevo monasterio y cedido el antiguo A una honrada y honesta y muy virtuosa matrona que se dice Catalina de Bustamante para que ende instruyese a las hijas de los sentildeores de la comarcala cual con el favor de Dios y limosnas que don Hernando [Corteacutes] les haciacutea para su sustentacioacuten [teniacutea en esa casa-hogar] hasta trescientas mujeres antes maacutes que menos (Vega 14)

Estas laquocasas-hogarraquo no estaban regentadas necesariamente por monjas sino por lo que llamaban laquobeatasraquo mujeres que sin estar estar sujetas a la autoridad eclesiaacutestica se dedicaban a un laquolucro honestoraquo Llamadas tambieacuten laquobeateriosraquo eran diferentes a los conventos de monjas y constituiacutean las primeras escuelas de la mujer en la Nueva Espa-ntildea (Vega 20-21) Fue gracias al ejemplo de mujeres como Catalina de Bustamante que dedicaron sus vidas a la educacioacuten de los indiacutegenas que existiesen otras continuando su ejemplo Motoliniacutea dice claramente que laquode ese primer encerramiento (el de Texcoco regentado por Catalina) salieron otras honestas y muy virtuosas duentildeas que ensentildeaban a las maacutes menudasraquo (Vega 23)

Pero dontildea Catalina de Bustamante pese a ser una singular mujer y la iniciadora de la educacioacuten de la mujer en Meacutexico no fue un caso aislado corresponde maacutes bien a un patroacuten al que se ajustaron muchas de las pioneras de la Nueva Espantildea que sembraron instituciones de educacioacuten de la mujer En 1530 unos antildeos maacutes tarde aparecioacute una de las grandes protectoras de la instruccioacuten femenina en Ameacuterica La emperatriz Isabel de Portugal (Vega 24)

Desde comienzos de la conquista fueron varios los centros docentes regentados por mujeres en los que la ensentildeanza no estaba impartida por monjas Una de las institucio-nes maacutes sobresalientes del sistema educativo fue el Colegio de Nintildeas que se establecioacute en la ciudad de Meacutexico a principios del siglo XVI con maestras que no eran monjas Estas seglares conocidas comunmente como laquomigasraquo eran las descendientes de las antiguas beatas Su ubicacioacuten permanente fue determinada en 1548 lugar que serviriacutea de escue-la ininterrumpidamente hasta 1862 cuando el edificio fue convertido en bodega (Vega 60) No se debe perder de vista que no soacutelo por el hecho de llevar una vida secular se

151ESPANtildeOLAS DE ULTRAMAR EN LA HISTORIA Y EN LA LITERATURA

gozaba de maacutes privilegios Era maacutes bien al contrario En las carreteras las mujeres segla-res no inspiraban el mismo respeto que las monjas que ademaacutes teniacutean contacto cons-tante con personas de los dos sexos no pertenecientes a la Iglesia (Arenal 297) Ademaacutes dentro de las murallas del convento desapareciacutean muchas de las barreras sociales que limitaban a la mujer de esta eacutepoca

La presencia femenina y la monarquiacutea

Pues iquestcoacutemo sabes tuacute preguntoacute don Quijote que los grandes llevan detraacutes de siacute a sus caballerizos Yo seacute lo direacute respondioacute Sancho Los antildeos pasados es-tuve un mes en la corte y alliacute vi que paseaacutendose un se-ntildeor muy pequentildeo que deciacutean que era muy grande un hombre le seguiacutea a caballo a todas las vueltas que daba que no pareciacutea que era su rabo Pregunteacute que coacutemo aquel hombre no se juntaba con el otro sino que siempre anda-ba tras deacutel Respondieacuterome que era su caballerizo y que era uso de grandes llevar tras siacute a los tales Desde enton-ces lo seacute tan bien que nunca se me ha olvidado (Cervan-tes Don Quijote)

Los monarcas espantildeoles fueron conscientes de que sin la presencia femenina difiacute-cilmente se podriacutea solidificar una conquista a todos los niveles La mayor parte de los virreyes y altos cargos trajeron a sus mujeres con ellos y en las ciudades principales de Hispano-Ameacuterica como la ciudad de Meacutexico Guatemala Lima o Potosiacute habiacutea mujeres que disfrutaban de una esmerada educacioacuten (gramaacutetica latiacuten poesiacutea historia muacutesica) Esto dariacutea origen a una elegante y hasta cierto punto sofisticada sociedad en la que las mujeres tomaron parte en asuntos maacutes importantes que los que sus homoacutelogas toma-ran en las colonias portuguesas laquoThere were brilliant vice-regal courts at Mexico City and Lima far exceeding anything that could be found in Portuguese or English America during the seventeenth centuryraquo (Boxer 39) Las estadiacutesticas con las que contamos hoy no soacutelo demuestran que las mujeres llegaron al Nuevo Mundo en respetables porcen-tajes sino que ademaacutes tuvieron una participacioacuten activa llegando a intervenir en algu-nos casos en las liacuteneas de vanguardia Resulta difiacutecil aproximarse al estado de aacutenimo de aquellas mujeres que vivieron en eacutepocas tan lejanas Para ello es necesario indagar en los documentos de la eacutepoca para lograr rescatar del pasado todos esos tesoros de la historia muchas veces tergiversados y manipulados con el fin de que sirvan a propoacutesi-tos actuales Es en los viejos manuscritos donde queda testimoniada su presencia tan rica en dolores tragedias y por queacute no en amores Fue la llegada de estas mujeres una brisa de esperanza y de ilusioacuten para aquellos que ya estaban en las tierras de ultramar y

152 JUAN FRANCISCO MAURA

veiacutean venir de su propia tierra aquello que maacutes antildeoraban amantes madres hermanas Un haacutelito de vida y poesiacutea que suavizaba las costumbres de estos rudos y romaacutenticos pioneros laquoporque para ser hombres de tales empresas algo de romaacutentico debioacute de existir en ellos y que es tan propio del espantildeol y abandonariacutean en brazos tan gentiles sus bruscos modales que habiacutean adquirido en aacutespero contacto en selvas y montantildeasraquo (Villafantildee 125)

Hoy sabemos que en la normativa oficial de la Espantildea del siglo XVI y XVII se favoreciacutea el paso de mujeres al Nuevo Mundo Afirmar lo contrario no solamente es falso sino que implica un desconocimiento total de los primeros dos siglos de la colonizacioacuten espantildeola La presencia de estas mujeres espantildeolas fue efectiva laquolas disposiciones al respecto demuestran claramente que se teniacutea especial intereacutes en su arraigo y que se tra-taba de defender su posicioacuten de mujeres casadas con conquistadores y colonizadoresraquo (Villafantildee 126) Los monarcas comprendiacutean que era praacutecticamente imposible que los hombres viviesen sin mujeres y que de ser asiacute era de esperar que se cometiesen abusos con las indias lo que incidiriacutea en la moral social y en el buen gobierno de la colonia Ademaacutes sin un asentamiento definitivo con hogares y familias difiacutecilmente se podriacutea llevar a cabo una presencia permanente en las nuevas colonias (Orsquo Sullivan-Beare 45)

Empezando por los Reyes Catoacutelicos la preocupacioacuten de que en las colonias se esta-bleciesen nuacutecleos que tuviesen como base la familia cristiana fue clara Las capitulacio-nes que a este efecto se hicieron entre los conquistadores y la Corona fueron nume-rosas La efectuada entre Rodrigo de Baacutestidas y Carlos V puede ser un buen ejemplo Fechada en Valladolid el 6 de noviembre de 1524 muestra el propoacutesito de Baacutestidas de establecer una colonia permanente en la desembocadura del riacuteo Magdalena en el terri-torio que hoy vendriacutea a corresponder a Colombia El documento firmado por el Empe-rador comienza asiacute

El Rey Por cuanto por parte de vos Rodrigo de Baacutestidas vecino de la ciudad de Santo Domingo de la Isla Espantildeola Me fueacute fecha relacioacuten que por servicio de la Catholica Reyna Mi Sentildeora e Nuestro os ofre-ceacuteis de poblar e poblariades la provincia e puerto de Santa Marta que en Castilla de Oro llamada la Tierra Firme e que la poblariades dentro de dos antildeos siguientes haciendo en ella un pueblo en que no menos haya en eacutel al presente cincuenta vezinos que los quince de ellos sean casados y tengan consigo a sus mujeres y que lo teniades fecho dentro de dos antildeos y de hoy en adelante lo maacutes que fuese posible asiacute de cris-tianos espantildeoles como de indios (Restrepo 1 30)

De igual manera el priacutencipe Felipe (futuro Felipe II) en las capitulaciones establecidas en 1547 con Juan de Sanabria para que eacuteste fuese como gobernador y capitaacuten general de la dicha provincia escribe lo siguiente laquoPrimeramente que seais obligado e os obligeis a llevar destos Reynos de Castilla a la dicha provincia del Rio de la Plata cien casados con sus mujeres e hijos para poblar la dicha provincia y con ellos llevareis a vuestra muger e hijos (CDI de Ameacuterica y Oceaniacutea 23 119)

En numerosas ocasiones se pone de manifiesto el apoyo de la monarquiacutea a la emigra-cioacuten femenina tantas que difiacutecilmente se podriacutean enumerar todos los casos Lo cierto es que la legislatura vigente favoreciacutea la emigracioacuten y traslado de mujeres con toda una se-

153ESPANtildeOLAS DE ULTRAMAR EN LA HISTORIA Y EN LA LITERATURA

rie de alicientes137 sobre todo si eacutestas estaban casadas pasaje para llevar a las familias franquicia de derecho para los artiacuteculos que portasen consigo favoritismo en cargos destinos y contrataciones a aquellos que pasasen con sus mujeres incluyendo ademaacutes de los castellanos y leoneses a suacutebditos de otras partes de la corona incluso genoveses y portugueses si estos veniacutean acompantildeados de sus consortes (Fernaacutendez Duro 15-16)

Incluso se llegoacute a imponer penas a aquellos hombres casados que no llevasen a sus mujeres con ellos a Indias en el teacutermino de un antildeo El mismo emperador en una ceacutedula otorgada al virrey de la Nueva Espantildea le recomendaba que laquoprocurase persuadir a ca-sarse a los solteros que estuviesen en edad y situacioacuten de hacerloraquo prometieacutendoles que al efectuar el matrimonio seriacutean preferidos en el reparto de indios En la isla de San Juan de Puerto Rico los cargos oficiales y oficios puacuteblicos debiacutean de ser desempentildeados por los casados en primer lugar En Meacutexico ocurrioacute lo mismo con los cargos de corregido-res (Konetzke laquoemigracioacutenraquo 140-41) Felipe II al igual que sus antecesores y sucesores reiteraraacute y justificaraacute los beneficios de los que seraacuten acreedores aquellos que tengan allaacute a sus mujeres laquoque los que han servido en los descubrimientos de las dichas Indias y tambieacuten los que ayudan a la poblacioacuten dellas que tienen allaacute sus mugeres sean preferi-dos en los aprouechamientos qualesquierraquo mandando que despueacutes de los conquistado-res se tuviera en cuenta para la laquoprovisioacuten de los corregimientosraquo a los colonos casados siempre que estuvieran capacitados para dichos cargos (Konetzke laquoemigracioacutenraquo 141)

Las disposiciones en favor del matrimonio son claras ya sea por medio de un favo-ritismo manifiesto como en los casos antes citados o mediante medidas de cohercioacuten para que esta poliacutetica se llevase a cabo Don Sebastiaacuten Ramiacuterez de Fuenleal obispo de Santo Domingo y presidente de la Audiencia de Meacutexico propuso que a aquellos enco-menderos que no estuviesen casados y que no hubiesen tomado parte en la conquista se les quitase los indios concedidos con la obligacioacuten de devolveacuterselos si en el plazo de un antildeo habiacutean contraiacutedo matrimonio (Konetzke laquoemigracioacutenraquo 142-43) Por supuesto hubo excepciones a estas reglas En algunos casos ni la mujer teniacutea especial intereacutes en vivir junto con su marido en las Ameacutericas ni el marido queriacutea ir a buscar a su mujer pasado el plazo de un antildeo En el presente documento y de forma excepcional las auto-ridades reales protegen a los conyuges para que puedan seguir viviendo separados en continentes diferentes

Nuestras justicias de la ysla de Cubagua e otras qualesquier de las nuestras Yndias yslas e tierra firme del mar oceacuteano e a cada uno e qualquier de vos a quieacuten esta mi ceacutedula fuese mostrada por parte de Alonso de Tapia nuestro veedor de la provincia de Paria me ha sido hecha relacioacuten que ha mucho tiempo que reside en esas partes donde nos ha servido en lo que se ha ofrecido e que agora vos otros le apre-miaacuteis a que venga o embiacutee a estos Reinos por su muger lo cual no puede al presente hazer a causa de no ter posibilidad para ello a mi me ha suplicado vos mandase que no le compeliacuteesedes ny apremiaacutesedes a que viniese o enviase por la dicha su muger y dieacutesedes por libres los fiadores que tenyades para que dentro de un antildeo embiariacutea o verniacutea por

137 Reales Ceacutedulas de los antildeos 1502 y 1503 Academia de la Historia Coleccioacuten Muntildeoz tomo 75 fols 209 y 220 citado por Fernaacutendez Duro 15

154 JUAN FRANCISCO MAURA

ella o como la mi merced fuese lo cual visto por los de nuestro consejo juntamente con una peticioacuten presentada por dontildea Mariacutea Gudiel muger del dicho Alonso de Tapia por la cual nos suplica lo mismo que acor-dado que debiacutea mandar esta mi ceacutedula para vos por la qual vos mando que no compelaacuteis ni apremieacuteis al dicho Alonso de Tapia a que venga ni enviacutee a estos reinos por la dicha su muger si no fuere a que la pro-vea de lo que fuere necesario para su mantenimiento y deys por libres quales quier fianzas que sobre ello haya dado e no fagades ende al por alguna manera Firmado en la villa de Valladolid a VII diacuteas del mes de febrero de mil e quinientos e treinta y siete antildeos yo el licenciado Con-de de Samano y sentildealada del cardenal Beltraacuten y Carbajal [Aparte en letra pequentildea] Este diacutea se despachoacute una provisioacuten por la cuaacutel su Mag hizo merced a Alonso de Tapia de la veedoriacutea de la provincia de Paria por muerte de Garciacutea de Aguilar con las clausulas ordinarias y con el mismo salario que teniacutea Aguilar Firmado del emperador y de Beltraacuten y Bernal y Velaacutezquez El Rey (Registro de disposiciones Riacuteo Marantildeoacuten AGI Indiferente General Legajo 416 libro 2 Fols 94v y 95r)

El punto maacutes interesante a destacar de todas estas disposiciones oficiales en cuanto a la emigracioacuten femenina al Nuevo Mundo no es otro que la libertad que se da a la mujer de decidir si quiere o no casada o sin casar trasladarse al nuevo continente no como una imposicioacuten sino como un precepto laquoel espiacuteritu de las disposiciones en el sentido de asegurar la vida marital de los casados significa que la mujer que su marido invita a pa-sar a las Indias puede negarseraquo (Villafantildee 127) Habriacutea que ver las opciones laquorealesraquo ade-maacutes de las legales y econoacutemicas que le quedaban a la mujer si tomaba esta decisioacuten

El saber la libertad de eleccioacuten que estas mujeres teniacutean de antemano antes de aden-trarse en las interminables penalidades y aventuras que los viajes de la navegacioacuten tran-soceaacutenica suponiacutean hace que sus hechos y esfuerzos cobren auacuten maacutes relieve En nume-rosas ocasiones estas mujeres cruzaron el oceacuteano una y maacutes veces sin otro motivo que el de defender los derechos e intereses de los suyos Lo que resulta maacutes valioso de todo esto es que lo hicieran por propia iniciativa arriesgando sus vidas para que se hiciese justicia y para que no les faltase lo necesario a aquellos que estaban en la otra orilla Las autoridades vigentes conocedoras de los vaciacuteos legales existentes en las nuevas colo-nias se apresuraron a poner en vigor aquellas normas que redundaran en el beneficio de los menos favorecidos por las circunstancias La institucioacuten del matrimonio cuya trans-cendencia es fundamental en la vida juriacutedica y social de la mujer tuvo que ser legislada en Ameacuterica con una serie de nuevas disposiciones agregados modificaciones y aclara-ciones Asiacute pues la legislacioacuten de base espantildeola tuvo que sufrir en tierras americanas esta serie de cambios por motivos poliacuteticos y sociales (Villafantildee 126)

Para hacer un sumario de lo dispuesto hasta el siglo XVI en cuanto a la legislacioacuten de las mujeres que teniacutean familia o intereses en Indias merece la pena mencionar que existieron una serie de disposiciones que protegiacutean a las mujeres para que eacutestas no se viesen abandonadas por sus maridos En un epiacutegrafe de la Recopilacioacuten de 1680 (libro VII tiacutetulo 3) se deja ver claramente la preocupacioacuten de las autoridades en este asunto laquoDe los casados en Espantildea e Indias que estaacuten ausentes de sus mujeres y esposasraquo (Vi-llafantildee 126-27)

155ESPANtildeOLAS DE ULTRAMAR EN LA HISTORIA Y EN LA LITERATURA

La lista de disposiciones se hace interminable En los reinados de Fernando el Catoacute-lico Carlos V Felipe II Felipe III o incluso Carlos II la insistencia es constante La ra-zoacuten de esta insistencia seriacutea bastante obvia dado que con un oceacuteano por medio seriacutean muchos los que se aprovechasen de llevar una doble vida marital sin el estricto control y vigilancia de sus mujeres que se encontraban en la peniacutensula La ley XXVII libro IX tiacutetulo XXVI determina laquoDeclaramos por personas prohibidas para embarcarse y pasar a las Indias todos los casados y desposados en estos reinos lsquosino llevaren con ellos sus mujeresrsquo aunque sean virreyes oidores gobernadores o nos fuesen a servir en cual-quier cargo y oficios de Guerra Justicia y Hacienda porque es nuestra voluntad que todos los susodichos lleven a sus mujeresraquo (Villafantildee 127) laquoLos eclesiaacutesticos eran los en-cargados de dar cuenta a los tribunales competentes de aquellos que estando casados permaneciacutean en Indias sin sus mujeres Son reiteradas las disposiciones de Fernando el Catoacutelico en este sentidoraquo138 En 1514 el rey don Fernando ordena en una provisioacuten para la isla Espantildeola laquodoy licencia eacute facultad aacute cualquier persona naturales de estos Reynos para libremente se puedan casar con mujeres naturales de esa dicha ysla sin tener que incurrir por ello en pena algunaraquo (Villafantildee 129)

No se debe olvidar tampoco a aquellas mujeres que decidieron pasar a las laquonuevas tierrasraquo solteras Estas mujeres tambieacuten tuvieron un papel importante en el desarrollo de las nuevas colonias Los organismos espantildeoles del momento como los mandatarios indianos y todos los cronistas no dejaron pasar desapercibida la importancia social de estas mujeres en la poliacutetica de poblamiento laquo[E]s cierto que los pueblos de Indias nuevamente poblados no se tienen por fijos o estables ni permanentes hasta tanto que mujeres espantildeolas entren en ellos y los encomenderos y conquistadores se casen por muchas causas y respetos buenos y saludables que para ello hayraquo (Villafantildee 126-27)

Si la intencioacuten era la de una presencia permanente en las tierras americanas la mujer soltera que pasase a ellas siempre seriacutea un motivo maacutes para el colono o conquistador de continuar en el mismo suelo Se podriacutea empezar una familia si asiacute se quisiese sin tener que pensar en volver a la metroacutepoli ya fuese a disfrutar de los bienes adquiridos o a laquobuscarraquo una esposa El problema aparecioacute cuando se produjo un exceso de mujeres solteras lo que de alguna manera alteroacute la estructura social existente ya que no habiacutea muchas opciones para ellas aparte del matrimonio o el convento

En consideracioacuten a que la experiencia habiacutea demostrado que un exce-sivo nuacutemero de mujeres ejerciacutea perniciosa influencia sobre la moral y las costumbres se suplicaba al rey no otorgase a aquellas tantas auto-rizaciones para emigrar al Peruacute La ciudad de la Plata fundada en 1538 emite en 1577 un informe en el que se expone la urgente necesidad de que se funde un convento de monjas pues en el territorio de las Au-diencias de Los Charcas existiacutea un gran nuacutemero de muchachas que no pudieacutendose casar se hallaban en gran peligro de perderse (Konetzke laquoemigracioacutenraquo 149)

138 Solorzano Pereira Juan de Libro Primero de la Recopilacioacuten de las Ceacutedulas Reales Cartas y Provisiones y Or-denanzas Reales Noticia preliminar de Ricardo Levenne Universidad de Buenos Aires Facultad de Derecho Y Ciencias Sociales Pub del Instituto de Historia del Derecho Argentino Coleccioacuten de Textos y Documentos para la Historia del Derecho Argentino t V Buenos Aires Imp de la Universidad de Buenos Aires 1945 (Li-bro I Ley 10 laquoQue los Espantildeoles puedan casar con Indias y al contrario a su voluntadraquo t2 p 138 citado en Villafantildee 129

156 JUAN FRANCISCO MAURA

Entristece ver coacutemo se manejan las cifras de estas mujeres como si de ganado o de bienes suntuarios se tratase Por otra parte existieron irregularidades como la de pobla-doras espantildeolas que vivieron amancebadas con hombres que ya estaban casados en la peniacutensula Normalmente esto ocurriacutea cuando la estancia del conquistador se prolonga-ba maacutes de lo debido en lugares donde habiacutea pocas espantildeolas Muchas veces nacieron hijos de estas uniones que hicieron auacuten maacutes difiacutecil la situacioacuten para las mujeres que esperaban en Espantildea a un marido que ya no teniacutea ningunas intenciones de volver En los juicios de residencia los documentos acostumbran a citar estos casos ya que era parte de su obligacioacuten castigar las irregularidades extramatrimoniales y salvaguardar las buenas costumbres familiares que con tanto intereacutes se deseaba mantener laquoUn ejemplo nos lo da la isla de Cuba donde en 1532 viven con hombres casados Olalla Hernaacuten-dez Santillana Aranda lsquola Cordobesarsquo Catalina de Leoacuten Catalina Saacutenchez Francisca Hernaacutendez Mayor de Azebedo Juana de Valeros y lsquouna mujer que estaba en casa de Ayalarsquoraquo (Borges 416)

Estos casos no fueron aislados y mucho menos en Cuba centro neuraacutelgico de todo el movimiento de ida y vuelta entre la metroacutepoli y el Nuevo Mundo Estas ocho acusa-ciones por lo tanto no tienen porqueacute considerarse extraordinarias y menos en el lugar maacutes cosmopolita de las Indias en esos momentos al que llegaban flotas a cada momen-to Al parecer existieron casos parecidos en el Riacuteo de la Plata Peruacute y Nueva Espantildea (Ratcliffe 347) El margen legal para que estas mujeres viviesen como quisiesen estuvo limitado por una moral que veiacutea uacutenicamente en el matrimonio o el convento una salida laquovaacutelidaraquo para que fueran aceptadas socialmente Los hombres en iguales circunstan-cias fueron juzgados por una laquomoralraquo mucho maacutes permisiva

La mujer y el cuerpo eclesiaacutestico

Pues iquestquieacuten diablos os traiacutedo aquiacute dijo don Quijote siendo hombre de la iglesia iquestQuieacuten sentildeor replicoacute el caiacutedo laquomi desventuraraquo Pues otra mayor os amenaza dijo don Quijote sino me satisfaceacuteis a todo cuanto primero os pregunteacute (Cervantes Don Quijote )

Otro factor a tener en cuenta en un anaacutelisis sobre la presencia de la mujer en el Nuevo Mundo es el que tiene que ver con la institucioacuten maacutes importante de las que llegaron desde Europa la iglesia catoacutelica Sin aacutenimo de criticar a tan compleja institucioacuten res-ponsable de gran parte de los aconteceres en el Nuevo Mundo vale la pena analizar algunas singularidades Muchos de sus miembros fueron grandes ejemplos de valor e inteligencia a la hora de tratar los maacutes variados y escabrosos asuntos con los que se encontraron los cristianos en la otra orilla durante este periacuteodo Se debe resaltar tam-

157ESPANtildeOLAS DE ULTRAMAR EN LA HISTORIA Y EN LA LITERATURA

bieacuten su caraacutecter medieval en la manera de hacer apostolado y de entender y tratar a los potenciales cristianos Si se tienen en cuenta los privilegios y prerrogativas que algunas de las altas jerarquiacuteas eclesiaacutesticas tuvieron no seriacutea superfluo estimar que un respeta-ble porcentaje de la poblacioacuten de origen laquodudosoraquo muy bien podiacutea venir de la misma iglesia Fueron muchas las viacutectimas y muchas las familias divididas por un padre laquoinvi-sibleraquo Gran parte de los hijos o laquosobrinosraquo de estos sacerdotes pasaron a ocupar cargos similares incluyendo los privilegios que estos cargos llevaban consigo como si se trata-se de cualquier otro oficio gremial transmitido generacionalmente regla tan comuacuten en la Europa medieval Todaviacutea a finales del siglo XIII en Espantildea los derechos de los hijos y nietos de los sacerdotes estaban protegidos por la ley sin que hubiesen podido ser erradicados por las reformas gregorianas (Ratcliffe 347)139

Las letras espantildeolas ya se haciacutean eco de estos lances amorosos entre representantes de la Iglesia y ciertas damas del lugar desde los tiempos del poeta riojano Gonzalo de Berceo En su obra maacutes conocida Los milagros de Nuestra Sentildeora Berceo describe con un realismo ingenuo y sencillo relatos de humor y de humanismo sobre aquellos hombres de carne y hueso que eran perdonados por la intercesioacuten de la Virgen Mariacutea Juan Ruiz por su lado haraacute de su Libro de buen amor la obra maacutes representativa en este sentido Seriacutea prolijo recordar la actuacioacuten de la Iglesia durante diversos periacuteodos de la Edad Media no soacutelo en Espantildea sino en toda Europa En la Espantildea musulmana del siglo XII concretamente en Sevilla el comportamiento de los representantes de la iglesia cristia-na (mozaacuterabe) en territorio islaacutemico es duramente criticado por el sevillano Ibn Abdun Este precioso documento muestra el estricto control y falta de confianza que existiacutea sobre la mujer prohibieacutendolas que entrasen en las laquoabominablesraquo iglesias cristianas

porque los cleacuterigos [cristianos] son libertinos fornicadores y sodomi-tas Asimismo debe prohibirse a las mujeres francas que entren en la iglesia maacutes que en diacuteas de funcioacuten o fiesta porque alliacute comen beben y fornican con los cleacuterigos y no hay uno de ellos que no tenga dos o maacutes de estas mujeres con que acostarse Han tomado esta costumbre por haber declarado iliacutecito lo liacutecito y viceversa Convendriacutea pues mandar a los cleacuterigos que se casasen como ocurre en Oriente y que si quie-ren lo hagan (Leacutevi-Provenccedilal 150)

Pese a existir una convivencia paciacutefica durante gran parte de la Edad Media entre los tres credos monoteiacutestas de Espantildea (cristianos musulmanes y judiacuteos) esto no suponiacutea que no existiese desprecio y desconfianza entre estos grupos religiosos Dice Abdun resaltando el peligro que suponiacutea que una mujer entrase en casa de un cleacuterigo cristiano de vida ceacutelibe

No debe tolerarse que haya mujer sea vieja o no en casa de un cleacuterigo mientras eacuteste rehuacutese casarse Obliacutegueseles ademaacutes a circuncidarse co-mo les obligoacute al-Mutadid pues si a lo que dicen siguen el ejemplo de Jesuacutes (iexclDios les bendiga y salve) Jesuacutes se circuncidoacute y precisamente ellos que han abandonado esta praacutectica tienen una fiesta que celebran solemnemente el diacutea de su circuncisioacuten (Leacutevi-Provenccedilal 150-151)

139 Valdriacutea la pena ver si han cambiado mucho las cosas desde hace quinientos antildeos a esta parte o si in-cluso la iglesia moderna ha retrocedido en tolerancia en cuanto a las relaciones sexuales de los representantes de la Iglesia

158 JUAN FRANCISCO MAURA

El historiador argentino Germaacuten Arciniegas recoge un pasaje ilustrativo de lo men-cionado anteriormente pero trasladado al ambiente de la colonia diciendo que incluso en poblaciones pequentildeas como Santa Fe con poco maacutes de un convento y una ermita la fragilidad de la carne enredaba a frailes soldados y virreyes por igual laquoEl buen So-liacutes que murioacute en olor de santidad con la cabeza reclinada sobre un par de ladrillos y en saya de franciscano cruzaba en las noches el solar de su palacio para ir a besar a la Marichuelaraquo (118-19)

Arciniegas recoge tambieacuten un suceso aparecido en el diario de Lima en 1667 que no tuvo que ser extraordinario durante los primeros antildeos de la colonia laquoEl fraile carmelita mdashGrande hereje y siendo sacerdote deciacutea misa gran perro lujurioso deshonesto que relatando sus maldades dijo que en cierta ciudad habiacutea conocido carnalmente a maacutes de trescientas y sesenta mujeres y en un convento de monjas habiacutea cometido muchos sacrilegios Este lo trujeron preso de Buenos Aires por Chileraquo (119)

Las controversias de la iglesia moderna sobre las relaciones que los eclesiaacutesticos de-ben tener con el sexo femenino parece que no han encontrado todaviacutea respuesta Sigue existiendo miedo y recelo a que la mujer comparta no soacutelo poder en la jerarquiacutea de la iglesiacutea sino en la vida privada de los miembros de la institucioacuten En la Nueva Espantildea el primer obispo de Meacutexico Juan de Zumaacuterraga viendo en la mujer un ser de tentacioacuten irresistible prohibioacute terminantemente la presencia de eacutestas en su casa Ni siquiera para su limpieza y aseo El franciscano Juan de Torquemada se refiere a este comportamien-to como una de las virtudes del popular obispo

Fue este benditiacutesimo prelado muy amigo de la virtud y de virtuosos y aceacuterrimo reprehendedor de vicios y viciosos y tan enemigo de la ociosidad que no permitiriacutea que alguno de su casa estuviese ocioso fue amiciacutesimo de la limpieza por lo cual jamaacutes consintioacute que mujer alguna entrase en su casa aunque fuese necesaria al servicio de ella ni nunca consintioacute que por alguna ocasioacuten subiese mujer a lo alto y aposentos de ella antes lo teniacutea todo cerrado como un monasterio porque sabiacutea (como quien tambieacuten sabiacutea) que la ocasioacuten suele derribar los maacutes fuertes y robustos corazones (450 lib 20 cap 31)

No fueron uacutenicamente miembros de la iglesia catoacutelica los que valoraron la lucha con-tra la tentacioacuten siguiendo al pie de la letra el crudeliacutesimo refraacuten laquoentre santa y santo pared de cal y cantoraquo Se tienen algunas noticias de la vida social de los primeros tiem-pos de la colonia En estos documentos se puede observar coacutemo no distaban mucho las oacuterdenes que se dictaban en la metroacutepoli y las que se llevaban a cabo en la Nueva Espantildea La vida social tanto de damas como de algunos miembros de la iglesia de las colonias era maacutes laquorelajadaraquo de lo que las normas permitiacutean Gracias a la informacioacuten ofrecida por Manuel Romero de Terreros disponemos de los nombres de las primeras virreinas

Las esposas de los primeros cinco Virreyes Don Antonio de Mendoza Don Luis de Velasco Don Gastoacuten de Peralta Don Martiacuten Enriacutequez de Almanza y Don Lorenzo Suaacuterez de Mendoza Conde de la Coruntildea fueron respectivamente Dontildea Caterina de Vargas Dontildea Ana de Cas-tilla y Mendoza hija de Don Diego de Castilla Sentildeor de Gor y Caba-

159ESPANtildeOLAS DE ULTRAMAR EN LA HISTORIA Y EN LA LITERATURA

llerizo de Carlos V Dontildea Leonor de Vieo Dontildea Mariacutea Manrique hija del Marqueacutes de Aguilar y Dontildea Catalina de la Cerda hija del segundo Duque de Medinaceli (Romero 2)

Existen noticias concretas de la seacuteptima virreina de la Nueva Espantildea (1586) dontildea Blanca de Velasco marquesa de Villamanrique En ellas destaca lo anteriormente men-cionado sobre la falta de tolerancia existente en aquellos tiempos difiacutecilmente com-prensible si no fuera por fragmentos esporaacutedicos conservados sobre la vida colonial en la Nueva Espantildea En la siguiente Relacioacuten hecha por autores anoacutenimos sobre la visita que hizo Fray Alonso Ponce Comisario General de la Orden Seraacutefica a las provincias de la Nueva Espantildea se mencionan las eneacutergicas medidas que con los miembros de su orden en su opinioacuten de moral laquomuy relajadaraquo tomoacute este religioso Tambieacuten aparecen mencionadas sus relaciones con la Virreina

Captoacutese ademaacutes la enemistad del gobernante y de la Virreina Dontildea Blanca de Velasco hija del cuarto Conde de Nieva sentildeora seguacuten pare-ce de conducta ligera y caraacutecter maacutes que dominante laquoPor este mismo tiempo (septiembre de 1586) fueron el Virey y la Vireyna a holgarse y recrearse en la cibdad de Xochimilco Posoacute con toda su casa dentro de nuestro convento en un dormitorio deacutel y detuacutevose alliacute siete u ocho diacuteas en que los indios les hicieron grandes fiestas aunque les costaron caras porque en una dellas murieron dos o tres dellos con un tiro que se disparoacute y reventoacute y al principal indio de aquella cibdad hirieron muy malraquo (Romero 3-4)

A pesar del riacutegido control eclesiaacutestico y civil que habiacutea en la Nueva Espantildea existieron tambieacuten pareacutentesis en los que incluso miembros de la iglesia y mujeres mdashhumanos al fin y al cabomdash pudieron disfrutar de algunos momentos de regocijo y alegriacutea Con-tinuando con la cita anterior el mismo autor se queja del laquoexcesoraquo de libertad en los frailes que se suponiacutea que teniacutean que profesar una extremada pobreza y no digamos castidad En primer lugar se describen pormenorizadamente la abundancia en el tipo y cantidad de comida de toda clase dulces y vino que se consumieron con largueza y generosidad durante aquellas fiestas Pero lo que maacutes indigna al autor (o autores) fue que llegasen a entrar mujeres en el convento

y aunque todo esto es malo delante de Dios y delante de los hom-bres lo que maacutes mal parecioacute y de que todo el mundo tuvo que mur-murar fueacute la demasiada libertad rotura y disolucioacuten que hubo en en-trar y estar muy de propoacutesito mujeres no soacutelo la Vireyna y las suyas sino otras muchas dentro del dicho convento y andar por las celdas como si fuese cosa profana y como si no hubiera breve apostoacutelico que soacute graves penas y censuras prohibe estas entradas y como si a los frai-les no los comprendiera el dicho breve por admitirlas y no estuviera asiacute declarado y mandado por nuestros estatutos generales de Toledo (Romero 4-5)

La preocupacioacuten por las laquotentaciones de la carneraquo fuera del matrimonio siempre es-tuvo en la mente de los religiosos espantildeoles asiacute como de otras nacionalidades y reli-

160 JUAN FRANCISCO MAURA

giones que intentaban vanamente erradicar algo tan intriacutenseco al ser humano como a cualquier otra especie animal Esta preocupacioacuten se acentuoacute mucho maacutes en el Nuevo Mundo donde muchas sociedades tribales no veiacutean a la mujer como parte integrante de su propiedad privada La razoacuten es obviamente socioloacutegica y ha existido desde el principio de los tiempos en las civilizaciones maacutes primitivas laquoNo desearaacutes a la mujer del proacutejimoraquo El quebrantar este precepto equivaldriacutea a desestabilizar desde su base a la sociedad judeo-cristiana fundamentada en la familia Las penas aplicadas en estas transgresiones seraacuten lo suficientemente severas como para marginar socialmente mdashen el mejor de los casosmdash a aquellos que las pongan en praacutectica Siendo la mujer la encar-gada por la naturaleza de trasmitir la descendencia de la especie su libertad sexual se veraacute limitada por el peligro de quedar embarazada cada vez que ignore tal elemental precepto140

Primeras escritoras del Nuevo Mundo

Contra cuerdos y contra locos estaacute obligado cualquier caballero andante a volver por la honra de las mujeres cualesquiera que sean Cuanto maacutes por las reinas de tan alta guisa y pro como fue la reina Madaacutesima a quien yo tengo particular aficioacuten por sus buenas partes porque fuera de haber sido fermosa ademaacutes fue muy prudente y muy sufrida en sus calamidades que las tuvo muchas (Cervantes Don Quijote)

Fueron varias las escritoras que durante los siglos XVI y XVII tuvieron una relacioacuten di-recta o indirecta con el Nuevo Mundo Muchas de ellas eligieron la vida monaacutestica mdashen algunos casos como refugio huyendo de sus maridosmdash uacutenica salida en una estructura social en donde no eran muchas las opciones especialmente en una eacutepoca donde el fac-tor religioso pesaba casi tanto como el econoacutemico pero sobre todo para dedicarse a una vida espiritual difiacutecilmente alcanzable en otras circunstancias Mariloacute Vigil apunta que las monjas que lo eran por su propia voluntad ademaacutes de tener inquietudes religiosas tambieacuten las teniacutean intelectuales como es el caso de la escritora miacutestica espantildeola Santa Teresa de Jesuacutes (1515-1582) que ademaacutes de tener una de las vidas maacutes interesantes que se conozcan supo sacar tiempo para escribir las maacutes bellas manifestaciones de la poesiacutea liacuterica y sobre todo de la prosa castellana (Vigil 237-38) Cada una de estas mujeres de-dicadas a la vida literaria y espiritual de su tiempo se merece muchiacutesimo maacutes espacio del que se les pueda ofrecer en estas pocas liacuteneas No obstante con estas pasajeras men-

140 Aunque afortunadamente las cosas han cambiado para la mujer no se debe dejar de mencionar la can-tidad de abusos sexuales de la que es viacutectima en la sociedad moderna

161ESPANtildeOLAS DE ULTRAMAR EN LA HISTORIA Y EN LA LITERATURA

ciones se espera al menos incluirlas y poder despertar el suficiente intereacutes para que sus vidas y sus obras no sigan sumergidas en las simas del olvido Para que estas mujeres de la iglesia pudiesen satisfacer su curiosidad cognoscitiva era necesario romper todas aquellas barreras que supusiesen un estorbo o una restriccioacuten a la hora de investigar consultar o hablar con cualquier persona religiosa de cualquier orden o secular ya fue-se obispo o cleacuterigo Las posiciones intelectuales entre las diferentes oacuterdenes religiosas fueron muy dispares como bien es sabido No eran iguales los planteamientos teoloacute-gicos de los dominicos que los de los franciscanos o los de los carmelitas que los de los agustinos o jesuitas Era necesario por lo tanto tener acceso a estas fuentes de informa-cioacuten para poder constrastar las diferencias y hacer valoraciones propias (Vigil 237-38) El escritor espantildeol Caro Baroja destaca el caraacutecter enciclopeacutedico del catolicismo donde se han integrado corrientes y posturas muy dispares que a traveacutes del diaacutelogo daban cierto espacio al creyente con maacutes curiosidad intelectual para que este pudiese compa-rar y valorar las diferentes opciones que se le ofreciacutean (Vigil 237-38)

Varias de estas mujeres intelectuales fueron hijas de conquistadores que aunque na-cidas en suelo americano seguiacutean expresaacutendose en la lengua de sus padres con no me-nos fuerza que sus contemporaacuteneas peninsulares Es cierto que existieron numerosas escritoras en el Nuevo Mundo durante el siglo XVIII algunas dedicadas incluso al estudio de las matemaacuteticas como la mexicana Dontildea Francisca Gonzaga y Castillo Pero para limitar el presente trabajo a los siglos XVI y XVII uacutenicamente se incluiraacuten ejemplos de estos dos siglos

La peruana Josefa de Alarcoacuten publicoacute en 1648 unas liras dedicadas a las Exequias del Priacutencipe Baltasar Carlos

Cifro en capilla breveEl tribunal de la Magestad maacutes graveEn fe de lo que debeA Carlos que en dos mundos no cabe141

El caso de Sor Jeroacutenima de la Asuncioacuten es muy interesante una mujer que tuvo la oportunidad de viajar a Meacutexico y posteriormente a las Filipinas para cumplir con las mi-siones que le habiacutean sido encomendadas por su orden Nacida en Toledo en 1555 en el seno de una noble y acaudalada familia estuvo destinada a recorrer el mundo ofrecien-do sus servicios a todos los necesitados distinguieacutendose por su ardiente caridad laquovien-do que los galeotes eran tratados con dureza excesiva sobre todo cuando los llevaban de un pueblo a otro procuroacute aliviar las penas de aquellos desgraciados y lo consiguioacute en parteraquo (Serrano y Sanz 268 65) Hija del licenciado e ilustre jurista Pedro Garciacutea Yaacute-ntildeez y de dontildea Catalina de la Fuente ingresoacute contra su voluntad en el monasterio de las Clarisas de Santa Isabel de los Reyes (Toledo) el 5 de agosto de 1570 (Trevintildeo 46) hay que decir que eacutesta no seraacute la uacutenica voluntad contra la que tuvo que luchar

Sor Jeroacutenima se embarcoacute para Meacutexico y de alliacute partioacute hacia Manila junto con siete compantildeeras en el famoso laquoGaleoacuten de Manilaraquo que saliacutea anualmente del puerto mexi-cano de Acapulco Su viaje a las Filipinas duroacute un antildeo y tres meses desde su salida de Espantildea tiempo en el que demostroacute un gran valor y determinacioacuten por el soacutelo hecho de

141 Manuel Serrano y Sanz Apuntes para una biblioteca de escritoras espantildeolas desde el antildeo 1401 al 1833 vols 268 269 270 271 Biblioteca de Autores Espantildeoles (Madrid Atlas 1975) 268 19

162 JUAN FRANCISCO MAURA

embarcarse en tan precarias naves Fue la primera misionera de Oceaniacutea muriendo en Manila en 1621 Alliacute fundoacute el monasterio de Santa Clara que perviviriacutea hasta ser bom-bardeado en la Segunda Guerra Mundial (Trevintildeo 47) Escribioacute su Vida donde trata de la fundacioacuten del convento y de todas las tribulaciones mdashllegoacute a ser excomulgadamdash y satisfacciones que una vida dedicada a una causa justa proporciona Tambieacuten escribioacute una obra de caraacutecter filosoacutefico-teoloacutegico titulada Carta de marear en el mar del mundo nombre alegoacuterico que da cuenta de la enorme distancia recorrida a traveacutes del laquomar del espiacuterituraquo por sor Jeroacutenima He aquiacute algunos de sus versos de caraacutecter religioso

Vuestra soy para vos naciacuteiquestQueacute mandaacuteis hacer de miacute Inaccesible grandezaEterna Sabiduriacuteay bondad del alma miacuteaDios un ser poder y Altezamirad la suma pobrezade eacutesta que se ofrece aquiacuteiquestQueacute mandaacuteis hacer de miacute (Serrano y Sanz 268 66)

Ya en Meacutexico tenemos otro ejemplo de una mujer dedicada por completo a Dios y al estudio y composicioacuten de obras de caraacutecter teoloacutegico Dontildea Ana Mariacutea del Costa-do de Cristo nacida en la ciudad de Tlaxcala hacia el antildeo 1650 Tomoacute la orden de San Francisco para consagrarse a las labores de su orden y a la escritura Se dice que con los escritos de Dontildea Ana Mariacutea se podriacutean formar veinte tomos (Serrano y Sanz 268 282) Estas son algunas de sus obras Vida y muerte de Jesucristo Nuestro Sentildeor Vida del Seraacutefico Padre San Francisco de Asiacutes Vida de la iacutenclita Virgen Santa Clara Vida del sutiliacutesimo doctor Juan Duns Escoto

Pero no todas las monjas tuvieron vidas tan dedicadas al estudio y la oracioacuten Loacutegica-mente entre un nuacutemero tan grande de mujeres existioacute de todo y seriacutea un error pensar que todos los conventos femeninos estaban integrados por laquocaacutendidas palomasraquo Una monja en el siglo XVI y XVII teniacutea mucha maacutes fuerza que una mujer ordinaria ya que actuaban en grupo y la entrada a los recintos donde viviacutean estaba permitida solo a mu-jeres Esta situacioacuten las haciacutea mucho maacutes fuertes a todos los niveles que una mujer sola protegida uacutenicamente por su familia laquoLas monjas durante los siglos XVI y XVII lucharon por eludir la clausura y por zafarse del control que los frailes de las secciones masculi-nas de sus congregaciones ejerciacutean sobre ellasraquo (Vigil 230) Soacutelo un antildeo maacutes tarde que dontildea Ana Mariacutea del Costado de Cristo en 1651 y a 12 leguas de Meacutexico nacioacute la sin par Sor Juana Ineacutes de la Cruz hija de don Pedro Manuel de Asbaje natural de Vergara (Vizcaya) y de Dontildea Isabel Ramiacuterez de Santillana hija de espantildeoles (Serrano y Sanz 268 289) Por ser sin lugar a dudas la poeta maacutes importante de su tiempo y probable-mente la maacutes conocida del mundo hispano no profundizaremos en ella Su obra es un canto a la inteligencia y el exponente maacutes destacado de la literatura barroca americana tanto en prosa como en verso Destacareacute simplemente que Sor Juana Ineacutes pese a vivir en un sociedad donde no eran excesivas las libertades concedidas a las mujeres tuvo el caraacutecter y la determinacioacuten de dejarnos las maacutes bellas poesiacuteas amorosas que si bien estuvieron enmarcadas en un ambiente religioso como era de esperar por su condicioacuten

163ESPANtildeOLAS DE ULTRAMAR EN LA HISTORIA Y EN LA LITERATURA

pudieron transcender como unas de las maacutes bellas manifestaciones literarias que hoy en diacutea se conservan Fue su agudeza mental sensibilidad y cultura tal que no fueron suficientes los soacutelidos muros del convento para contener el genio de tan extraordinaria mujer Recordemos sus conocidiacutesimos versos en defensa de las mujeres

Hombres necios que acusaacuteisa la mujer sin razoacutensin ver que sois la ocasioacutende lo mismo que culpaacuteis142

Las metaacuteforas y la delicadeza que emplea en rebatir a su obispo en su laquoRespuesta a sor Filotea de la Cruzraquo no son solamente el epiacutetome del feminismo de su tiempo sino una de las maacutes brillantes manifestaciones del barroco hispano Poesiacutea teatro ensayo y un conocimiento extraordinario de las ciencias claacutesicas de su tiempo hacen de esta mujer un ejemplo extraordinario de las letras universales Ya son cientos los artiacuteculos y libros que se han escrito sobre Sor Juana y no dejan de aparecer tesis doctorales sobre los maacutes diversos temas conectados con la citada autora143 Como nos dice Stephanie Merrim en su documentada obra Early Modern Womenrsquos Writing and Sor Juana Ineacutes de la Cruz

She wrote and published on secular themes as atypical for a nun as human love Her remarkably extensive writings essayed and reenacted most of the (male) poetic dramatic theological and even philosophi-cal discourses of her times in the metropolis making her works a com-pendium of baroque culture in its diversity and syncretism Sor Juana self-creation as a learned women effectively toppled many of the walls in which she was materially enclosed and positioned her within the dynamic world of early modern European culture (xii)

No se debe dejar de mencionar a otras escritoras novohispanas de la eacutepoca que aun-que no fueron tan proliacuteficas y relevantes como Juana Ineacutes de la Cruz dejaron testimo-nio de algunos acontecimientos que tienen intereacutes socioloacutegico o testimonial Este es el caso de Dontildea Mariacutea Estrada Medinilla de igual nombre y apellido que la mujer que acompantildeoacute a las tropas de Corteacutes en su primera entrada a Meacutexico Natural de Meacutexico publicoacute toda su obra a mediados del siglo XVII concentraacutendose principalmente en la lle-gada del Marqueacutes de Villena virrey y capitaacuten general de la Nueva Espantildea a la ciudad de Meacutexico en el antildeo 1640 Escrita en octavas reales la obra trata de las fiestas de toros y cantildeas con que se obsequioacute al citado virrey Fue impresa en Meacutexico en 1641 (Serrano y Sanz 269 402)

Mucho maacutes importante para el presente libro es Dontildea Isabel de Guevara que escribioacute en 1556 la carta en que se expone la ayuda que ofrecieron las mujeres en el descubri-miento y conquista del Riacuteo de la Plata No cabe la menor duda de que esta carta es uno

142 Para una mejor comprensioacuten del caraacutecter de esta excepcional mujer veacutease entre los numeros trabajos publicados Fredo Arias de la Canal Intento de psicoanaacutelisis de Juana Ineacutes y otros ensayos sorjuanistas (Meacutexico Frente de Afirmacioacuten Hispanista 1972) 47

143 Veacuteanse entre otros trabajos Octavio Paz Sor Juana Ineacutes de la Cruz o las trampas de la fe Georgina Sabat de Rivers En busca de Sor Juana Margo Glantz Sor Juana la comparacioacuten y la hipeacuterbole Gerard C Flynn Sor Juana Ineacutes de la Cruz Stephanie Merrim Feminist perspectives on Sor Juana Ineacutes de la Cruz Pamela Kirk Sor Juana Ineacutes de la Cruz religion art and feminism

164 JUAN FRANCISCO MAURA

de los documentos maacutes importantes con que contamos en relacioacuten a la aportacioacuten fe-menina en el proceso de la conquista de Ameacuterica Su importancia viene dada por varios factores Primero es uno de los primeros testimonios mdashsi no el primeromdash en donde se expone abiertamente la indispensable colaboracioacuten de las mujeres en el descubrimien-to y conquista de tierras en el Nuevo Mundo laquoQue si no fuera por ellas todos fueran acabadosraquo En segundo lugar la informacioacuten vertida en estas liacuteneas presenta en parte la manera de pensar de una mujer espantildeola en tales circunstancias Extraordinario tes-timonio de primera mano que nos da una idea de lo que significoacute en muchos casos el valor y entrega constantes de muchas de estas mujeres que auacuten a riesgo de perder sus vidas no dudaron en luchar al lado de los hombres por una causa que consideraban laquocomuacutenraquo

La relevancia histoacuterica de dicha carta hace que merezca ser transcrita en su totali-dad

Carta de dontildea Isabel de Guevara a la princesa gobernadora dontildea Juana exponiendo los trabajos hechos en el descubrimiento y conquista del Riacuteo de la Plata por las mujeres para ayudar a los hombres y pidiendo repartimiento

para su marido Asuncioacuten 2 de julio de 1556

Muy alta y muy poderosa sentildeora

A esta provincia del Riacuteo de la Plata con el primer gobernador de ella don Pedro de Mendoza hemos venido ciertas mujeres entre las cuales ha querido mi ventura que fuese yo la una y como la armada llegase al puerto de Buenos Aires con mil quinientos hombres y les faltase el bastimento fue tamantildea el hambre que a cabo de tres meses murie-ran los mil esta hambre fue tamantildea que ni la de Jerusalem se le puede igualar ni con otra ninguna se puede comparar Vinieron los hombres en tanta flaqueza que todos los trabajos cargaban de las pobres mu-jeres asiacute en lavarles las ropas como en curarles hacerles de comer lo poco que teniacutean limpiarlos hacer centinela rondar los fuegos armar las ballestas cuando algunas veces los indios les veniacutean a dar guerra hasta cometer a poner fuego en los versos y a levantar los soldados los que estaban para ello dar arma por el campo a voces sargentean-do y poniendo en orden los soldados porque en este tiempo como las mujeres nos sustentamos con poca comida no habiacuteamos caiacutedo en tanta flaqueza como los hombres Bien creeraacute V A que fue tanta la so-licitud que tuvieron que si no fuera por ellas todos fueran acabados y si no fuera por la honra de los hombres muchas maacutes cosas escribiera con verdad y los diera a ellos por testigos Esta relacioacuten bien creo que la escribiraacuten a V A maacutes largamente y por eso cesareacute Pasada esta tan peligrosa turbunada determinaron subir el riacuteo arriba asiacute flacos como estaban y en entrada de invierno en dos bergantines los pocos que quedaron vivos y las fatigadas mujeres los curaban y los miraban y les guisaban la comida trayendo la lentildea a cuestas fuera del naviacuteo y animaacutendolos con palabras varoniles que no se dejasen morir que presto dariacutean en tierra de comida metieacutendolos a cuestas en los

165ESPANtildeOLAS DE ULTRAMAR EN LA HISTORIA Y EN LA LITERATURA

bergantines con tanto amor como si fueran sus propios hijos Y como llegamos a una generacioacuten de indios que se llaman tinbues sentildeores de mucho pescado de nuevo los serviacuteamos en buscarles diversos modos de guisados porque no les diese en rostro el pescado a causa de que lo comiacutean sin pan y estaban muy flacos Despueacutes determinaron subir el Paranaacute arriba en demanda de bastimento en el cual viaje pasaron tanto trabajo las desdichadas mujeres milagrosamente quiso Dios que viviesen por ver que en ellas estaba la vida de ellos porque todos los servicios del naviacuteo los tomaban ellas tan a pechos que se teniacutea por afrentada la que menos haciacutea que otra sirviendo de marear la vela y gobernar el naviacuteo y sondar de proa y tomar el remo al soldado que no podiacutea bogar y escotar144 el naviacuteo y poniendo por delante a los soldados que no se desanimasen que para los hombres eran los trabajos verdad es que a estas cosas ellas no eran apremiadas ni las haciacutean de obliga-cioacuten ni las obligaba si solamente la caridad Asiacute llegaron a esta ciudad de la Asuncioacuten que aunque ahora estaacute muy feacutertil de bastimentos en-tonces estaba de ellos muy necesitada que fue necesario que las muje-res volviesen de nuevo a sus trabajos haciendo rosas con sus propias manos rosando y carpiendo y sembrando y recogiendo el bastimento sin ayuda de nadie hasta tanto que los soldados guarecieron de sus fla-quezas y comenzaron a sentildeorear la tierra y adquirir indios e indias de su servicio hasta ponerse en el estado en que ahora estaacute la tierra He querido escribir y traer a la memoria de V A para hacerle saber la ingratitud que conmigo se ha usado en esta tierra porque al presente se repartioacute por la mayor parte de los que hay en ella asiacute de los anti-guos como de los modernos sin que de miacute y de mis trabajos se tuviese ninguna memoria y me dejaron de fuera sin me dar indio ni ninguacuten geacutenero de servicio Mucho me quisiera hallar libre para me ir a presen-tar delante de VA con los servicios que a SM he hecho y los agravios que ahora se me hacen mas no estaacute en mi mano porque estoy casada con un caballero de Sevilla que se llama Pedro de Esquivel que por servir a SM ha sido causa que mis trabajos quedasen tan olvidados y se me renovasen de nuevo porque tres veces le saqueacute el cuchillo de la garganta como allaacute VA sabraacute A que suplico mande me sea dado mi repartimiento perpetuo y en gratificacioacuten de mis servicios [en el origi-nal del AHN Diversos doc 141 dice ademaacutes mande que sea proveydo mi marido de alguacuten cargo conforme a la calidad de su persona pues el de su parte por sus servicios lo merece] lo merece Nuestro sentildeor acre-ciente su Real vida y estado por muy largos antildeos De esta ciudad de la Asuncioacuten y de julio 2 1556 antildeosServidora de V A que sus Reales manos besa

Dontildea Isabel Guevara

144 Sacar agua de un riacuteo acequia o presa

166 JUAN FRANCISCO MAURA

Sobremdash A la muy alta y muy poderosa sentildeora Princesa dontildea Joana Gobernadora de los reinos de Espantildea etc ndash En su Consejo de Indias (Isabel de Guevara 619-21)

Iroacutenicamente la carta teniacutea que llegar a manos de la desdichada heredera del trono de Castilla e hija de los Reyes Catoacutelicos Juana laquola Locaraquo que habiacutea muerto el antildeo an-terior Son profeacuteticas las palabras de esta mujer no soacutelo porque sus hechos personales quedasen en el olvido sino porque incluso se ha borrado la historia de las mujeres en el Nuevo Mundo negando su presencia Por lo menos Isabel Guevara tuvo acceso a una pluma iquestCuaacutentas seriacutean las que ni siquiera sabriacutean escribir

Otra contemporaacutenea fue dontildea Leonor de Iciz que vivioacute durante la segunda mitad del siglo XVI Interesa sobre todo por los sonetos que escribioacute en elogio de Ercilla soldado que participoacute en la conquista de Chile y que se inmortalizoacute con su obra La Araucana (Serrano y Sanz 269 534) Lo mismo hizo Dontildea Bernarda Lintildeaacuten en 1610 autora de otro soneto en memoria del capitaacuten Gaspar Peacuterez de Villagraacute que participoacute en la conquista de Nuevo Meacutexico (Serrano y Sanz 270 14) Los escritos de estas mujeres tratan de de dos de las eacutepicas maacutes dramaacuteticas de la conquista

En el Peruacute y en pleno siglo XVII aparece otra fundadora de conventos Sor Bernardina de Jesuacutes que ademaacutes fue comparada con Santa Teresa por la semejanza de sus laquocartasraquo con las de la santa de Avila Fue fundadora del convento de Tacunga en Quito maacutes tarde destruiacutedo por un terremoto Dice Serrano y Sanz con respecto a su biografiacutea un tanto legendaria que fue carmelita descalza de Lima y hermana de Dontildea Mariacutea Benavides y Esquivel abuela de D Pedro de Peralta Barnuevo (Serrano y Sanz 269 553) Dicen que esta santa se alimentoacute durante treinta antildeos con laquochochos y caacutescaras de naranja hecho tan raro como increiacuteble Cuando fallecioacute reparaban las monjas en ponerle una vara de azucenas porque habiacutea sido casada y aquellas flores aparecieron milagrosamente sobre el cadaacuteverraquo (Serrano y Sanz 269 553)

Otra limentildea del primer cuarto del siglo XVII con reputacioacuten de santa fue Dontildea Luisa Melgarejo En este caso no se trata de una religiosa de oficio sino de la mujer del doctor Juan de Soto La uacutenica diferencia es que dontildea Luisa al parecer teniacutea laquovisiones y reve-lacionesraquo lo que debioacute poner nervioso a maacutes de un miembro del tribunal del laquoSanto Oficioraquo que consideraron sus escritos laquoculpadosraquo De su papel de laquosantaraquo pasa por lo tanto al de laquoposesaraquo o laquoendemoniadaraquo El inquisidor de Lima Gaitaacuten escribioacute un infor-me donde a traveacutes de la opinioacuten puacuteblica y de otras averiguaciones se deciacutea que dontildea Luisa Melgarejo laquomujer santaraquo sabiacutea cuando las almas de los difuntos saliacutean del Purga-torio El diacutea 14 de noviembre de 1623 se decidioacute tomar posesioacuten de todos los cuadernos en los que habiacutea escrito las experiencias de todos sus laquoarrobos suspensiones extasis y revelacionesraquo Estos cuadernos una vez recogidos presentaron toda una serie de al-teraciones borrones adiciones enmiendas incluso diferente letra por lo que despueacutes de haber sido examinados resultaron culpables145 Excelente imaginacioacuten debioacute tener dontildea Luisa Melgarejo la suficiente al parecer para convencer a algunos miembros de la iglesia de que en sus escritos laquohabiacutea algoraquo que mereciacutea la pena Estas cosas ocurriacutean en Lima uno de los centros culturales maacutes importantes de la vida social y poliacutetica en la Ameacuterica espantildeola Lima a comienzos del siglo XVII seguacuten el empadronamiento llevado

145 Serrano y Sanz 270 47 Veacutease J T Medina Historia del tribunal del Santo Oficio de la Inquisicioacuten de Lima (1569-1820) (Santiago Imprenta Gutemberg 1887) Tomo II 34-41

167ESPANtildeOLAS DE ULTRAMAR EN LA HISTORIA Y EN LA LITERATURA

a cabo en 1614 por el marqueacutes de Montesclaros era una ciudad de 25000 habitantes de los que 11000 eran espantildeoles El nuacutemero de religiosos y religiosas llegaba a 1720 (Pittaluga 77)

Se sabe que en la Isla de Santo Domingo durante el siglo XVI nacioacute o al menos resi-dioacute una poeta de ceacutelebre apellido en los aconteceres del Nuevo Mundo Dontildea Elvira de Mendoza de la que se conserva un manuscrito en la Real Academia de la Historia laquoCantares miacuteos que estaacuteis rebeladosraquo Eugenio de Salazar hace un elogio de ella como poeta en un Soneto a la ilustre Poeta y Sentildeora Dontildea Elvira de Mendoza moradora en la ciudad de Santo Domingo (Serrano y Sanz 270 53)

Nacida en Burgos sobre el antildeo 1590 dontildea Luisa de Padilla merece un lugar aparte dentro del grupo de mujeres escritoras de su eacutepoca Por su estilo faacutecil y castizo su no-vedad de pensamientos y su rica erudicioacuten recibioacute el siguiente comentario de Manuel Serrano y Sanz laquoPocas figuras hay en nuestra historia literaria femenil que puedan compararse a esta eminente prosista acaso la maacutes notable de cuantas florecieron en Es-pantildea durante el siglo XVIIraquo (Serrano y Sanz 270 95-96) Este comentario y comparacioacuten deberiacutea ampliarse para que tambieacuten incluyese a laquola historia literaria varonilraquo

Dontildea Luisa fue defensora de la labor que la Inquisicioacuten estaba realizando en la laquolim-piezaraquo de mujeres laquosoldados del demonioraquo que existieron en algunas provincias espa-ntildeolas en aquel tiempo Muchas de las mujeres que combinaban la magia con los po-deres curativos fueron condenadas no solamente por hombres de la Inquisicioacuten sino tambieacuten por mujeres de todas las clases sociales como es el caso de Luisa de Padilla condesa de Aranda En su obra Elogios de la verdad e invectiva contra la mentira preveniacutea contra aquellos que practicaban artes en contra de la religioacuten cristiana La magiacutea negra seguacuten Padilla era la causante de que muriesen casi tantas personas como otras causas naturales habieacutendose descubierto hasta seis mil brujas en Vizcaya y Guipuzcua con-fesando una mujer de un pueblo pequentildeo haber matado con su laquomagiaraquo a ochocientas personas (Perry 31) Eran estos laquomales de ojoraquo y maldiciones seguacuten la autora las causas de que se secasen los pechos de las madres lactantes que se separasen las parejas casa-das y que abortasen las embarazadas (Perry 31)

Si se tiene en cuenta que dontildea Luisa estuvo emparentada con la maacutes rancia aristocra-cia de su tiempo o lo que es lo mismo con algunos de aquellos que en cierta manera dirigiacutean los destinos de Espantildea en aquella eacutepoca (Duques de Lerma Duque de Uceda Marqueacutes de Cueacutellar Conde de Santa Gadea Marqueacutes de Belmonte por citar algunos) se comprenderaacute mejor su identificacioacuten con una institucioacuten que en teoriacutea velaba por la salvaguarda de los valores laquoeternosraquo de una Espantildea destinada a ser la campeona del ca-tolicismo durante los siglos XVI y XVII El padre de dontildea Luisa fue don Martiacuten de Padilla y Manrique extraordinario militar que proboacute su valor contra enemigos moriscos ingle-ses holandeses piratas berberiscos y el renegado genoveacutes Muley Faxad Fue veterano de la batalla de Lepanto donde apresoacute a cuatro galeras y acompantildeoacute con su escuadra a la reina Dontildea Margarita de Austria cuando vino de Geacutenova en 1598 laquoHabiacutea obtenido a 24 de julio de 1587 el tiacutetulo de Conde de Santa Gadea y en 1596 el de Capitaacuten General de la Armada del mar Oceacuteanoraquo (Serrano y Sanz 27095-96)

Por otra parte tambieacuten se sabe que dontildea Luisa participoacute directamente y desde tem-prana edad en la praacutectica de algunas actividades intelectuales como la historia y la arqueologiacutea a la vez que dedicaba su tiempo a virtudes cristianas como la caridad y el socorro de los necesitados (Serrano y Sanz 270 97) Resulta mucho maacutes faacutecil compren-

168 JUAN FRANCISCO MAURA

der la postura ideoloacutegica de esta gran mujer si tienen en cuenta ademaacutes de los factores antes mencionados otros tantos de caraacutecter biograacutefico concernientes a su educacioacuten y matrimonio

Otra escritora fue la mexicana dontildea Mariacutea Casilda Pozo natural de Temestla (Meacutexi-co) Nacida en el mes de abril de 1682 dejoacute escrita su biografiacutea en 16 cuadernos el ma-nuscrito original se encuentra en la biblioteca del colegio de San Gregorio de Meacutexico Fue su confesor el jesuiacuteta Domingo Quiroga que fue quieacuten la incitoacute a escribir su obra (Serrano y Sanz 270 137) Sor Juana de San Antonio aparece a principios del siglo XVII formando parte de un grupo de religiosas espantildeolas que fueron a Manila por la ruta de Meacutexico Ademaacutes de distinguirse por sus cualidades personales su obra interesa por ofrecer informacioacuten testimonial y costumbrista acerca de la forma de vestir de chinos y japoneses (Serrano y Sanz 270 225)

Otra monja esta vez ecuatoriana fue Gertrudis de San Ildefonso Nacida en 1652 profesoacute su vocacioacuten en el convento de Santa Cruz de Quito dejando escrita su vida por mandato de su confesor el padre Martiacuten de la Cruz el cual hizo una biografiacutea laquoen tres gruesos voluacutemenesraquo Gertrudis de San Ildefonso murioacute en 1709 (Serrano y Sanz 270 300) en olor de santidad

Sor Mariacutea Ana Agueda de San Ignacio nacioacute el 3 de marzo de 1695 en la dioacutecesis de la puebla de los Angeles en un rancho del lugar de Santiago Tecaliacute (Serrano y Sanz 270300) Esta monja mexicana escribioacute varias obras durante su vida conventual a lo largo de la cual desempentildeoacute el cargo de priora por muchos antildeos Entre sus obras todas de caraacutecter piacuteo y de laquoamor divinoraquo escribioacute un curioso y laquocopiosoraquo tratado de la Leche virginal de la Soberana Madre de Dios El padre Fr Juan de Villa Saacutenchez hace el siguiente comentario al respecto laquoen que hablando primero en sentido natural de los beneficios que debemos a Nuestra Sentildeora pasa a tratar en sentido miacutestico y alegoacuterico enten-diendo en la leche la doctrinaraquo (Serrano y Sanz 270301) Mexicana fue tambieacuten Sor Petronila de San Joseacute que ejercioacute como abadesa del Real monasterio de Jesuacutes Mariacutea de la ciudad de Meacutexico Escribioacute Vidas de varias religiosas ejemplares obra que tiene su im-portancia ya que al parecer laquoDe esta obra se sirvioacute D Carlos de Siguumlenza y Goacutengora para escribir su Parayso Occidental (Meacutexico 1684) seguacuten eacutel mismo declara en el proacutelogo diciendo lsquoa quien si hay algo bueno en esta historia se le debe todorsquoraquo (Serrano y Sanz 270 354) Menos conocida fue su compatriota Sor Luisa de Santa Catalina natural de Xacona laquopueblo situado en las inmediaciones de Zamora (Meacutexico)raquo siendo bautizada en 1682 Escribioacute Cartas espirituales a su confesor el P Juan Loacutepez de Aguado (Serrano y Sanz 270 361-62)146

Todos estos escritos la mayoriacutea de ellos ignorados por el gran puacuteblico tienen la im-portancia de darnos una perspectiva diferente En otras palabras ensentildearnos la maacutes refinada sensibilidad de muchas mujeres que permanecieron y en su mayoriacutea siguen permaneciendo a laquooscurasraquo de una eacutepoca tan rica de la literatura espantildeola como fue el Siglo de Oro Este siglo fue tambieacuten en su dimensioacuten literaria y artiacutestica patrimonio de la mujer

146 Para profundizar en muchas de estas escritoras hispano-americanas la consulta de la Biblioteca Hispano-Americana de Beristain de Souza resulta de capital importancia

169ESPANtildeOLAS DE ULTRAMAR EN LA HISTORIA Y EN LA LITERATURA

Sor Nada ardores divinos de una monja adolescente escritos ineacutedi-tos de una recieacuten profesa del siglo XVI147

iexclQueacute encantadores son tus amores hermana miacutea espo-sa iexclQueacute deliciosos son tus amores maacutes que el vino Y el aroma de tus perfumes es mejor que el de los baacutelsamos Miel virgen destilan tus labios esposa miel y leche hay en tu lengua y el perfume de tus vestidos es como aroma de incienso (Cantar de los Cantares 4 10-11)

Sor Nada llamada asiacute por humildad seguacuten dice el Indice de manuscritos de la Biblio-teca Nacional de Madrid es uno de los ejemplos maacutes desconocidos e interesantes que tenemos de la poesiacutea y prosa amoroso-religiosa del siglo XVII Hasta la fecha nunca se habiacutea publicado su obra e incluso hasta el antildeo 1995 para mi sorpresa no habiacutea copias microfilmadas de sus manuscritos en la Biblioteca Nacional Serrano y Sanz en su libro Apuntes para una Biblioteca de Escritoras Espantildeolas hace una escueta y pasajera mencioacuten de esta mujer y de su obra (68-69) siendo eso todo lo que hasta ahora se sabiacutea de ella Sus escritos consisten en los siguientes manuscritos

1 laquoEn queacute consiste un verdadero amor de Diosraquo 9 hojas uacutetiles en 4ordm letra del siglo XVII Biblioteca Nacional de Espantildea Manuscrito 1295926

2 laquoPintura del Propio Amorraquo laquoPintura del propio Amorraquo 10 hojas uacutetiles en 4ordm letra del siglo XVII Biblioteca Nacional de Espantildea Manuscrito 1295927

3 laquoEsplicacioacuten sobre en queacute consiste la paz del Almaraquo laquoQuartillas aacute un Alma que padece soledad interiorraquo 7 hojas uacutetiles en 4ordm letra del siglo XVII Biblioteca Nacio-nal de Espantildea Manuscrito 1295828

En cuanto a su persona soacutelo se nos dice que laquose encubrioacute con este seudoacutenimo laquoSor Nadaraquo Esta monja desconocida de origen hispanoamericano posee toda la frescura e ingenuidad de una joven apasionada metida por vocacioacuten u obligacioacuten a ejercer la profesioacuten maacutes comuacuten para mujeres de cierta clase social de su tiempo En sus liacuteneas podemos encontrar un misticismo simple incluso en algunos momentos infantil pero a su vez lleno de una fuerza y sensualidad interior poco comuacuten en escritos de este geacute-nero que desborda los liacutemites del laquoamor divinoraquo a traveacutes de los diaacutelogos entre el Alma y el Esposo Sor Nada consigue proyectar su amor a Dios maacutes allaacute de una experiencia romaacutentica Su experiencia es sincera y genuinamente miacutestica trascendiendo la imita-cioacuten o la propia creacioacuten poeacutetica ficcionalizada (Hatzfeld 30) Algunos pasajes son de un

147 Veacutease mi artiacuteculo Sor Nada ardores divinos de una monja adolescente escritos ineacuteditos de una monja profesa del siglo XVIIraquo Espeacuteculo Revista de estudios literarios 26 (2004) 1-10 Universidad Complutense de Madrid http wwwucmesinfoespeculonumero26sornadahtml

170 JUAN FRANCISCO MAURA

alto contenido eroacutetico con sustantivos y metaacuteforas que recuerdan la maacutes iacutentima unioacuten amorosa en unos casos y el tierno amor maternal en otros

[T]e miro Jesus mio desnudo a las inclemencias del tiempo y ardien-do en puro fuego de Amor por la salud de las Almas y me ensentildeas a que te ame con todo mi corason y puresa de espiritu No atendiendo ni buscando umanos intereses ni a solisitar consuelos ni regalos espi-rituales que suelen empantildear la puresa del noble corason No mi Jesus amable pues antes me ensentildeaste tu puro Amor que desnudo sean [sic] de encaminar mis passos desde el pesebre asta la cuna en donde te miro tan desnudo como el pesebre y todo Sentildeor por mi Amor (Mss 12959 26 hoja 1 v)

El manuscrito (12959 27) de la mencionada serie de tres contiene algunas correccio-nes quizaacute hechas por el confesor o quizaacute por ella misma cuando se dirige con excesiva familiaridad y arrebatado fervor a su Amado148 He escogido el manuscrito (12959 Caja 28) en primer lugar por ser el ejemplo maacutes representativo de su poesiacutea y prosa En este manuscrito encontramos de forma maacutes directa que alegoacuterica toda la frescura de un diaacutelogo entre Jesuacutes y el alma que raya como diriacutea Cervantes laquoa la llana y sin rodeosraquo (667 lib 2 cap 38) con el doloroso y a veces desesperado deseo de la entrega y la unioacuten final con el Amado La ortografiacutea no ha sido corregida respetaacutendose el texto ori-ginal149 Veamos el siguiente fragmento

Mira que te amo con Amor de padre y con Amor de esposo el mas fino y puro enamorado que no tan solo me presio de darte mi mano sino tambien todo mi cuerpo y sangre para que con mi pan de vida te sustentes y te regales a tus anchuras y que con mi propio espiritu vivas en paz como tu lo deseas y que mis amores sean unico alivio en tus trabajos en esta mortal vida pues si esto es asi y sabes que muero por darte vida dime esposa mia de que te fatigas Dame querida tus bras-sos y dime si me amas como yo te amo (Hoja 4)

148 La antologiacutea de Promis ha procurado insertar entre los textos antoloacutegicos algunos que se refieren a la es-critura de mujeres fundamentalmente de aquellos generados en el interior de los espacios conventuales Estos textos se fundan como laquohistorias de vidasraquo y responden casi siempre a los requerimientos de los confesores de las monjas coloniales En este sentido resulta valiosiacutesima la incorporacioacuten de la llamada Relacioacuten autobiograacute-fica de Sor Ursula Suaacuterez como una muestra significativa de la escritura monjil entendida en esta eacutepoca (como tambieacuten en la tradicioacuten europea medieval) inserta en las denominadas laquolabores de manoraquo de las religiosas ya que el texto escrito por mandato se convertiacutea en una suerte de entramado o tejido linguumliacutestico es decir en un nuevo bordado que la mayor parte de las veces el confesor convertido en censor iba haciendo tachando y enmendando En la antologiacutea Promis agrega un texto de Sor Tadea Garciacutea de la Huerta titulado Relacioacuten de la inundacioacuten que hizo el riacuteo Mapocho de la ciudad de Santiago de Chile en el monasterio de Carmelitas titular de San Rafael el diacutea 16 de junio de 1783 se trata de un poema tipo romance escrito en versos octosilaacutebicos y que da cuenta de lo sucedido ese diacutea en el convento (Resentildea de la literatura del reino de Chile de Joseacute Promis Eddie Morales Pintildea httpwwwupaclpublicaciones2002literatura_promishtm)

149 Son frecuentes las faltas ortograacuteficas Una de ellas es el uso constante del seseo La ausencia de acentua-cioacuten y puntuacioacuten exceptuando alguacuten punto o coma arbitrario no seguido casi nunca de mayuacutescula inicial lo mismo que el uso igualmente aribitrario de la h o de b v r q g j m n x etc No olvidemos de la misma forma la laxitud linguumliacutestica existente en el siglo XVII (no sabemos a queacute parte de eacuteste pertenece el manuscrito) asiacute como la joven edad de la monja

171ESPANtildeOLAS DE ULTRAMAR EN LA HISTORIA Y EN LA LITERATURA

Los versos del presente manuscrito poseen la misma fuerza que tiene su prosa Con una estructura estroacutefica indefinida estaacuten aparentemente corregidos por alguien que tu-vo la oportunidad de conocer personalmente a la autora Muy probablemente se trate del padre al que hace referencia al principio del primer manuscrito laquoMandame el Pd que le declare en que consiste un verdadero amor a Diosraquo a continuacioacuten continuacutea con su caracteriacutestica humildad laquo[O]bedesere y dire lo q Dios me inspire segun mi rudesa y simplisidadraquo (Mss 12959 26) En cuanto a la fuerza pasional de esta joven observamos con cierta tristeza coacutemo aparece sublimada en sus escritos con toda la enegiacutea de una joven mujer llena de intensidad y vida pero encerrada en los liacutemites de un convento Veamos un ejemplo en donde responde el Alma en los siguientes versos

O mi enamorado Jesus O mi dulse y tierno amanteO alegria de los sielos O dulse Jesus amable

(Toda Sentildeor me derrito toda Sentildeor me desagoy quiero vivir por ti ea sentildeor abrasadme) [Tachado en el original]

Toda Sentildeor me derrito toda Sentildeor me desagoy quiero morir por vos ea Sentildeor que ya acabo

Ya tus amores me llaman ya tus perfumes me traencon suspiros y agonias Sentildeor hasta que te alcanse

O mi Jesus amoroso no puedo mas dilatarmeya la pasiensia me falta dulse Jesus abrasadme

(No puedo vivir sin vos no puedo mas dilatarmeya la pasiensia me falta dulse) [Tachado en el original]

No puedo vivir sin vos mi dulse Jesus amablepues me teneis echisada siendo mi esposo y mi Padre

Ay que me abraso Ay que me quemo del Amor deJesus nasareno como no tocan y tantildeen a fuego150

Estos versos llenos de arrebato sublimado conectan con toda la tradicioacuten miacutestica es-pantildeola que se remonta a Ramoacuten Llul y que culmina en el maacutes universal de nuestros

150 En toda la fuerza y simbologiacutea del amor maacutes iacutentimo del maacutes alto y sublime placer de la unioacuten de los amantes tal como lo encontramos en el Cantar de los Cantares y en San Juan de la Cruz Leemos en la Biblia

Ya me he quitado la tuacutenica iquestCoacutemo volver a vestirme Ya me he lavado los pies iquestCoacutemo volver a ensuciarlosMi amado metioacute su mano por el agujero (de la llave) y mis entrantildeas se estremecieron por eacutel Me levanteacute para abrir a mi amado Mis manos destilaron mirra y mis dedos mirra exquisita en el pestillo de la cerradura (5 3-5)

Nos ocurre lo mismo con San Juan de la Cruz en su insuperable poema laquoLlama de amor vivaraquo

iexclOh cauterio suaveiexclOh regalada llagaiexclOh mano blanda iexclOh toque delicadoque a vida eterna sabey toda deuda pagaMatando muerte en vida la has trocado

172 JUAN FRANCISCO MAURA

miacutesticos San Juan de la Cruz Esta tradicioacuten se extiende hasta finales del siglo XVII esto es hasta los finales del Barroco siendo un poco maacutes tardiacuteo en la Ameacuterica espantildeola Sin tener como propoacutesito discutir en el presente trabajo a queacute corriente miacutestica pertenece la obra de Sor Nada es necesario resaltar no obstante el hecho de que estaacute escrito por una mujer y ademaacutes de tierna edad El manuscrito 12959 Caja 26 termina con estas pa-labras laquo[T]odas estas boverias escrivi por entretenimiento siendo resien profesa en la religion Sor Nadaraquo Mas no por la juventud de su autora los escritos dejan de tener lo-gradas metaacuteforas imaacutegenes y siacutembolos sacados de la naturaleza La alegoriacutea de la unioacuten matrimonial poseeacute el fuego liacuterico de la maacutes apasionada de las relaciones amorosas vivi-ficada por perfumes flores insectos animales escarchas nieves o abrojos Por lo tanto aunque la narracioacuten destile cierta ingenuidad no carece por ello de un vocabulario rico con el sabor popular de la poesiacutea de los cancioneros y romances de tradicioacuten renacen-tista No ha sido otra mi intencioacuten que la de rescatar del olvido unos escritos en prosa y en verso llenos de frescura y espontaneidad que nos muestran la pasioacuten con que la joven novicia se laquoentrega en cuerpo y almaraquo a los menesteres de su profesioacuten guiada por un padre espiritual en esos primeros antildeos de formacioacuten Esta ha sido la razoacuten por la que presento a continuacioacuten el citado manuscrito en su totalidad

Sor Nada (Mss 1295928)

laquoEsplicacion sobre en que consiste la paz del AlmaraquolaquoQuartillas a un Alma que padece soledad interiorraquo

[7 hojas utiles en 4ordm letra del siglo XVII]

+

Esplicacion sobre en que consiste la paz del Alma

Pareseme segun mi rudo entender que la verdadera paz del Alma con-siste en una muy pura y buena consiencia en un corason liso y bien intensionado en una verdadera rectitud de espiritu en el qual el Alma procura bolar a Dios sin jamas detenerse a respetos umanos ni reparar en que me diran ni de que me censuraran sino me apresuro a seguir a unos entenderes y pareseres dorados en los quales pretende el mundo engantildear y ensuciar si se puede la puresa de un corason unicamente de Dios y de su Santa ley y se lo conserva cristalino con la divina asis-tencia de la gracia y comprendido de su Amor y temor siguiendo la luz divina de tan amante Sentildeor Dios y ombre verdadero con que este ilustrado corason ni se altera ni se mueve por los disfrasses dorados que ase el mundo y sus moradores mayormente con falssas amistades aunque con ellos muestre buena intension Con la misma grasia y luz de Dios conose el buen corason estos disfrasses que le ase el mundo y se retira de todo con espiritu y valor esto sin la menor alterasion sino que en suma paz se retira a buscar a Dios dentro de su mismo corason

173ESPANtildeOLAS DE ULTRAMAR EN LA HISTORIA Y EN LA LITERATURA

y se abrasa con su pura verdad en la qual se le descubren mil interio-res secretos tan solidos puros y verdaderos que la misma Alma queda abismada y de puro grandes no los puede bien comprender ni esplicar pero estos mismos secretos divinos le sirven de espuelas para no solo correr sino bolar con pies de plumas en seguimiento de su bien ama-do Jesus y como este soberano Sentildeor es tan amante de sus espossas las Almas luego que la ve bolar con pies de plumas la sale al encuen-tro en despoblado campo que se deve de llamar Campo de Amor de Dios y el mismo Sentildeor se viene a las manos por ser Dios que nos ama con Amor infinito de Padre benigno y amoroso con que asiendose en contra deso este divino enamorado en lo interyor de el Alma que le busca con ansias de servirle y amarle y en aquella soledad traban una conversasion amorosa y sensilla como la pluma simple de quien esto escrive

Divino enquentroDios y el Alma en la soledad

O Soberano Principe de la paz dise el Alma tus perfumes me traen a ti bolando porque alla en el mundo y sus valedores me pretendian engantildear y entretenerme con pegaminossas amistades que facilmen-te me pudieran envenenar y matarme apartandome de ti Mi dulse Jesus amable mi Redentor Soberano que con tantas ansias me sales al enquentro como siervo [ciervo] erido de mis Amores los quales tu Amor me ofrese para que con tu mismo Amor te ame y te sirva en paz sin perturbarme ni contristarme ni cansarme de padeser pasando si se ofrese por escarchas nieves espinas ni abrojos ni por otros diverssos trabajos ni piedras de contradision que tu me puedes permitir pues por mas que el mar se levante con sus ferosses olas contra mi ni piedras se me tiren al rostro en todo Sentildeor me quieres con serenidad pasifica sin la menor perturbasion Todo Sentildeor quieres que lo tome con Serenidad de espiritu y asi vengo a ti bolando para que mejor me ensentildees a vivir segun las leyes de tu noble condision que me son muy agradables por mas que el mundo me las despresie por segir sus vanidades y torsidas intensiones con apariensias de bien y con este engantildeo y bien me quie-ro mas a mi que no a mi proximo veo que segun mi pareser se pierden muchas Almas y tambien de aquellos que se depresian y pasan por muy espirituales Con que me paresen pocos los que llegan a padeser con desnudes151 de espiritu por tu purisimo Amor y me parese essas se quedan muy atrasadas en la virtud por el peligro de bolver muy atras el paso de modo que se pueden despentildear y pereser en su misma desgra-sia ya por soberbia o por otras enfermedades que se les pega al corason y asi lo pasan como siegos ignorantes sin advertir en sus peligros

151 La letra en cursiva es miacutea

174 JUAN FRANCISCO MAURA

este aquerdo Sentildeor y otros que tu verdad me ensentildea me ase venir uyendo de las paredes del mundo y me vengo a ti Dios mio bolando con las dos Alas del Amor y temor que tu mismo Amor me ofrese tan de gracia y tan de grado que no se duentildeo mio con que lo responder a tan soberano beneficio y finesa de tus entrantildeas de Amorvengo Sentildeor y esposo mio unicamente a descansar en ti pues los peli-gros del camino me an puesto en mucho sobresalto temiendo el per-derte y sin ti perderme para siempre por una eternidad sin fin pues deseo amado mio ganarme ganandote a ti y vivir en ti aora en vida y despues eternamente y estos cuidados me traen fatigada molida y cansada y no podre tener alivio y descanso sino viendome entre tus brassos aunque sea estando en cruz pues ese es el fin de mis deseos vivir y morir en ti ablame mi cordero manso y ensentildeame a que ver-daderamente te ame como fiel esposa ea mi caro amigo dame la ma-no pues sabes Amor mio que en mi no ay mano sin tu misma mano y asi mi Dios y Sentildeor mi Principe Soberano con umilde rendimiento y deseos de alcansarte te suplico me des la mano y me consueles en estos mis trabajos Deseo Sentildeor vivir en paz y los malos amores de mi Naturaleza flaca no me dejan detentar y no quieren por mi desgrasia atropellar con las leyes de tu Amor ni quisiera perturbar mi corason quando me veo con un torvellino de olas y contratiempos que a menu-do me suelen sercar pero si tu Sentildeor me das la mano nada temo sino que me aseguro y vivire en paz sin que me fatiguen los contratiempos pues mi mano en la tuya y mi espiritu en el tuyo por mas borrascas que me envistan no seran bastantes para rendir mi voluntad a la suya bien si para pronunsiar un fiat que resuene bien atras en tus oidos y que en medio de mis fatigas me ponga a cantar tus divinas misericor-dias hea Sentildeor ya pretendo serrar mis labios por no desir mas bove-rias y deseo Sentildeor oir tus palabras de vida eterna abla Sentildeor que tu sierva oye con atension y cuydado mira mi Dios que se me ase tarde y espero con prisa deseando saborearme y aprovecharme de los ecos de tu Santa dotrina pues todas tus palabras saben a eterna vida callen pues mis sentidos y potensias y todo se ponga en paz pues mi dulse y soberano Sentildeor no se escusara de ablar me aun que en mudo silensio hea mi gran Prinsipe de la paz ablame que tus puros amores me traen perdida por estos asperos montes y mis cortos pasos no te pueden dar alcanse mirame mi Dios a tus pies postrada como un vil gusano y me-nor ormiga de la tierraabla Jesus y dise a su esposa el Alma querida esposa mia que me pides y por que te muestras tan fatigada y mal sufrida no vives como corde-rita del campo buscando de mis pechos el sustancial pasto mi Amor no te sustenta y mi grasia te promete eterna vida pues dime amada de que te fatigas y te muestras mal sufrida mira que te amo con Amor de padre y con Amor de esposo el mas fino y puro enamorado que no tan solo me presio de darte mi mano sino tambien todo mi cuerpo y

175ESPANtildeOLAS DE ULTRAMAR EN LA HISTORIA Y EN LA LITERATURA

sangre para que con mi pan de vida te sustentes y te regales a tus an-churas y que con mi propio espiritu vivas en paz como tu lo deseas y que mis amores sean unico alivio en tus trabajos en esta mortal vida pues si esto es asi y sabes que muero por darte vida dime esposa mia de que te fatigas Dame querida tus brassos y dime si me amas como yo te amoResponde el Alma152 Tu mi Dios sabes si yo te amo pues de mi solo se que mis deseos y ansias buelan a ti mas no alcanso a saber si te amo como tu de-seas ser amado y como desconfio tanto de mi y de mis prosederes falssos temo Dios mio perderme y perderte y asi Sentildeor pues no desechas mis Amores y te muestras tan fino en amarme te pido me ensentildees a vivir segun las leyes de tu pura verdad y fina condisionhija mia dise Dios la prueva de un verdadero Amor consiste en sufrir callar y padeser por mi unico Amor y en todo seguir mis pasos sin ja-mas retroseder por mas fragoso que se muestre el camino pues nunca seran tantas las espinas las escarchas ni las nieves ni los vientos bo-rrascosos que te se ofrescan pasar por mi Amor como los que mi tierno y desinteresado Amor paso por ti y siempre con mis pies descalssos y asi hija y esposa mia muestrate costante en seguir lo perfecto de mis passos pues mi braso fuerte sera en ti y peleara por ti y te sera el todo en tus nesesidades y mi Amor te convertira en dulse y suave lo amargo y molesto a la condision de la carrne

Responde el Alma

O mi enamorado Jesus O mi dulse y tierno amanteO alegria de los sielos O dulse Jesus amable

(Toda Sentildeor me derrito toda Sentildeor me desagoy quiero vivir por ti ea sentildeor abrasadme) [Tachado en el original]

Toda Sentildeor me derrito toda Sentildeor me desagoy quiero morir por vos ea Sentildeor que ya acabo

Ya tus amores me llaman ya tus perfumes me traencon suspiros y agonias Sentildeor asta que te alcanse

O mi Jesus amoroso no puedo mas dilatarmeya la pasiensia me falta dulse Jesus abrasadme

(No puedo vivir sin vos no puedo mas dilatarmeya la pasiensia me falta dulse) [Tachado en el original]

No puedo vivir sin vos mi dulse Jesus amablepues me teneis echisada siendo mi esposo y mi Padre

152 La aparicioacuten de una mayuacutescula al principio de una oracioacuten es algo totalmente arbitrario en este ma-nuscrito dada la libertad ortograacutefica de la autora Como se puede observar en la mayor parte de las veces no es el caso

176 JUAN FRANCISCO MAURA

Ay que me abraso Ay que me quemo del Amor deJesus nasareno como no tocan y tantildeen a fuego

Responde Jesus Hija mia tus simples vozes oygo y aunque resuenan bien a mis oidos pero te deseo mas mansa y pasifica en tus fervores ya sabes que no siempre as de vivir en mantillas ni a los pechos de tu Madre por que es rason que padescas con espiritu fuerte como mu-jer valerosa por que a una esposa del Rey soberano y prinsipe de la paz no le estan bien chiquerias ni fervores de nintildea malcriada y ya es ora que la destete su Madre la Naturaleza y que empesando su nueva vida camine con el favor de mi grasia sigiendo mis passos de eterna vida esto con sus pies descalssos segun mis leyes de Amor puro y desinteresado lo tienen ordenado153 y vivir en paz como lo deje en-cargado a mis apostoles Santos repitiendoles varias vezes Vivir en pas y caridad esto es un vivir en Dios y Dios en el Alma y asi hija mia el Alma que vive en paz vive en mi Como mis cortesanos en el cielo y pues me pides que te ensentildee a vivir segun las leyes de mi condision Repito el desir que te debes mostrar sufrida en todo tiempo y estado sin permitir en tu corason que ni aun los fervores se adelanten con estremos ni ademanes sino atiende y aprende de mi purisima Madre pues siempre la veras si bien lo consideras que mientras vivio en el mundo en todos sus trabajos se mostro firme fuerte costante como piedra diamante Pues mirandome nintildeo entre sus brasos desnudo en el pesebre desnudo y crusificado en los brassos de una cruz En estos y otros passos no se mudo su rostro sino que en suma serenidad y pasifico corason toda se sacrificaba enteramente en los brassos de mi Amor y rendido su corason y voluntad en la de mi eterno Padre por ejemplo te la doy y deseo que aprendas de sus nobles calidades pues te aseguro carisima que las leyes de mi condision y pura verdad todo lo allaras enserrado en el corason de mi purisima Madre sedle fiel y descansaras en paz

+

Quartillas a un alma que padese soledad interior

1Un Alma afligida y tristese ve en un campo desiertay en el su esposo la tieneAtormentada y sedienta

153 Es a traveacutes de estas liacuteneas lo que hace suponer que la autora de este diaacutelogo amoroso entre el Alma y Je-suacutes es novicia esto es laquoque estaacute empesando su nueva vidaraquo En las mismas liacuteneas una vez maacutes se hace alusioacuten al laquodesteteraquo de su vida civil laquoa una esposa del Rey soberano y principe de la paz no le estan bien chiquerias ni fervores de nintildea malcriada y ya es ora que la destete su Madre la naturalesaraquo (fol 5)

177ESPANtildeOLAS DE ULTRAMAR EN LA HISTORIA Y EN LA LITERATURA

2Pendiente se ve en el AyreSolo un hilo la sustentasin tocar el pie en el sueloporque del no tome tierra

3Mirandola esta yto a ytoaquel sol que la atraviesay la enviste con sus rayosmas ella no pestantildeea

4Como sigarra padese y como a tal se atormentabatiendo sus mismas Alasy el corason se atraviesa

5Con penas sustos temoresquando se mira assi mesmasin tener valor en nadaporque es la misma flaquesa

6Pero el Amor de su esposotoda su atension le llevay la pone en un abismopero cubierto en tiniebla

7Desea dar algun bueloy subir con ligeresapero se mira travadacon una fuerte cadena

8Clama suspira y padeseMas del todo se sujetaRindiendo su voluntadA la divina clemencia

9Los enemigos del AlmaCruelmente le asen guerray ella aunque firme y constantelos reselos la atormentan

178 JUAN FRANCISCO MAURA

10de todos modos padeseaunque gosa la asistensiadel divino esposo amadoque en su interior se recrea

11Solo de verla penary con verla tan serenadise resibe mil gustosde su sigarra pequentildea

12Le sabe el mundo a mil yelesy su trato le atormentaviendo en el mil falsedadesque todas saben a tierra

13Para poderse librardeja de correr y buelacon las Alas del Amory el mismo Amor se la lleva

Una vida dedicada a un amor divino un amor que le haraacute llenar un buen nuacutemero de cuartillas dedicadas a tan alta empresa Se desconoce si la vocacioacuten de Sor Nada con-tinuoacute con tanta intensidad el resto de sus diacuteas Ciertamente la vida en el covento no era faacutecil En algunos casos la experiencia era traumaacutetica incluso fatal para algunas de las adolescentes de la Ameacuterica Espantildeola Las reglas del claustro eran severas por varias razones Estas joacutevenes si no teniacutean el permiso de la superiora no podiacutean recibir visitas no podiacutean volver a sus casas su correspondencia era censuraba y no podiacutean salir del periacutemetro conventual Igualmente se levantaban antes del amanecer para oir misa tra-bajaban el resto del diacutea y lo maacutes interesante es que muchas veces esta vida era aceptada por muchas

Page 9: Tercera parte: Mujeres en la vida intelectual - …parnaseo.uv.es/Editorial/Maura/TerceraParte.pdf · La Biblia, por su parte, hace repetidas menciones de la mujer y sobre el comporta-

139ESPANtildeOLAS DE ULTRAMAR EN LA HISTORIA Y EN LA LITERATURA

marido o unos hijos se interpusiesen en el tiempo concentracioacuten y dedicacioacuten que una actividad artiacutestica requiere Pese a todo no siempre fue asiacute El maacutes conocido ejemplo lo tendriacuteamos en Sor Juana Ineacutes de la Cruz la cual tuvo que sufrir problemas con algunos altos cargos eclesiaacutesticos asiacute como envidias de propios y extrantildeos por ser entre otras cosas superior en inteligencia y cultura a la mayor parte de sus contemporaacuteneos

Muchos conventos estaban bien provistos de libros a menudo donados por aquellas familias que teniacutean alguacuten miembro dentro del convento o simplemente por simpati-zantes de las diferentes oacuterdenes religiosas En la paz del claustro algunas de estas mu-jeres llegaron a adquirir un formidable desarrollo intelectual Pero a pesar de la calidad del material que existe sobre tan insignes mujeres se las ha preferido mantener en la oscuridad Como deciacutea con ironiacutea el pensador espantildeol Benito Feijoacuteo (1676-1764) sobre las disputas entre hombres y mujeres laquoLo cierto es que ni ellas ni nosotros podemos en este pleito ser jueces porque somos partes y asiacute se habiacutea de fiar la sentencia a los aacutengeles que como no tienen sexo son indiferentesraquo (46)

El escritor argentino Vicente G Quesada ya se quejaba a principios del presente si-glo de la pobriacutesima informacioacuten que ofreciacutea la enciclopedia francesa Larousse sobre la vida colonial en Meacutexico cuando refirieacutendose a eacutesta deciacutea lo siguiente laquoLos uacutenicos libros que se conociacutean eran el almanaque el catecismo del P Ripalda el Antildeo cristiano la vida de los santos y otros de ese geacuteneroraquo (Quesada 125) El mismo autor refutando lo anterior escribe

Por uacuteltimo recordareacute la notabiliacutesima publicacioacuten moderna La Bibliogra-fiacutea mejicana del siglo XVI eruditiacutesima y que constituye el maacutes concluyen-te testimonio para desautorizar la ligereza del Dictionnaire de Larousse que afirma lo que ignoraEl celebrado escritor mejicano don Francisco Pimentel ha publicado su erudita obra Historia criacutetica de la literatura y las ciencias en Meacutejico desde la conquista hasta nuestros diacuteas es un trabajo que comprende cuatro partes divididas asiacute Novelistas oradores historiadores y autores cientiacuteficos Por esta breve relacioacuten se comprende que es temeridad indisculpable pretender dar noticias del movimiento intelectual en el virreinato de Meacutejico sin conocer las obras de Pimentel y de Garciacutea Icaz-balceta ni la edicioacuten primitiva o corregida de Beristain (126)

En los maacutes importantes nuacutecleos urbanos de Meacutexico y Peruacute se podiacutea apreciar clara-mente la participacioacuten directa de la mujer en las maacutes diversas actividades sociales y cul-turales Esta participacioacuten llegoacute incluso al extremo de algunas mujeres que insultaron li-teralmente a las autoridades competentes cuando lo creyeron necesario laquoEstas mujeres que lloran seriacutean las mismas que creyeron como causa principal de aquellas muertes las disposiciones de las Leyes Nuevas porque no tuvieron empacho de insultar al virrey Blasco Nuacutentildeez Vela a quien lsquodieron gritasrsquo (sic) las espantildeolas y lo maldijeron como si llevara consigo la ira de Diosraquo (Borges 52) Lo mismo ocurre en la peniacutensula Dentro del plano cultural durante la primera mitad del siglo XVII destacaraacute entre los escritores de su tiempo Mariacutea de Zayas y Sotomayor gran novelista y defensora de los atributos de su sexo cuya obra narrativa y dramaacutetica disfrutoacute de una gran popularidad en la peniacuten-sula asiacute como en Hispano-Ameacuterica laquoCasi no ha habido novelista maacutes simpaacutetico a los lectores espantildeoles que Dontildea Mariacutea de Zayas seguacuten las muchas reimpresiones que se han hecho de sus obrasraquo (E Fernaacutendez de Navarrete xcvii) Entre sus admiradores contoacute

140 JUAN FRANCISCO MAURA

con el infatigable y genial Lope de Vega que la elogioacute en su obra El laurel de Apolo laquoNo desaprovechoacute Dontildea Mariacutea ninguna ocasioacuten de abogar por las mujeres contra la tiraniacutea de los hombres suponiendo que como deacutespotas las quieren ignorantes para tenerlas sujetasraquo (E Fernaacutendez de Navarrete xcvi)

Pero no tiene que ser exclusivamente una mujer la que defienda los atributos y los derechos de su sexo Se podriacutean citar varios ejemplos donde desde los inicios de las letras espantildeolas la mujer aparece comprendida e incluso defendida por escritores con-temporaacuteneos Veacuteanse los siguientes versos escritos en el siglo XIV por el genial Arcipres-te de Hita

Mujeres abrid los oiacutedos y escuchad una buena leccioacuten escuchad estas palabras guardaos del varoacuteniexclGuardaos no os acaezca como el leoacutenal asno sin orejas y sin su corazoacuten(892)133

No se puede despreciar la influencia que tuvo en la Espantildea del siglo XVI Erasmo de Roacutetterdam el intelectual maacutes reputado de su tiempo Erasmo con una clarividencia mental poco comuacuten trata de los temas maacutes cotidianos asiacute como de los maacutes profun-dos Sus escritos siempre al borde de lo hereacutetico dejaron bien claro su independencia ideoloacutegica Tambieacuten supo dar su opinioacuten sobre las mujeres y de la importancia que una buena educacioacuten supondriacutea a la hora de llevar a cabo las tareas diarias

With regard to female education Erasmus is unequivocal In Abbatis et eruditae he categorically states that education and learning are as desirable in a woman as in a man And although there is naturally no suggestion that the education and learning should be directed towards a career there are no carping restrictions as to what the education should consist of or where the learning should end (McKendrick 9)

Fue una mujer en particular la que llamoacute la atencioacuten del erudito holandeacutes Catalina de Aragoacuten hija de Isabel la Catoacutelica Grandes debieron ser las virtudes de esta dama cuando tan renombrados laquolibrepensadoresraquo la calificaban como laquomilagro del aprendi-zaje femeninoraquo

At the centre of the movement was a Spanish woman Catherine of Aragon first wife of Henry VIII of England Her mother Isabel la Catoacutelica had made sure that Catherine and her sisters received an advanced and enlightened education under two eminent Italian hu-manists Antonio and Alessandro Geraldini and Catherine herself was considered by Erasmus and Sir Thomas Moore to be a miracle of fe-male learning At her request Juan Luis Vives between 1524 and 1528 wrote his De institutione feminae christianae for her daughter Mary and he dedicated it to Catherine (McKendrick 6)

La pobre Catalina ya presagiaba su triste final Existe una dramaacutetica y muy poco co-nocida carta conservada en la Academia de la Historia donde eacutesta escribe a su sobrino el emperador Carlos V pidieacutendole ayuda y proteccioacuten a su desesperada situacioacuten en Inglaterra

133 Juan Ruiz Libro de Buen Amor 193

141ESPANtildeOLAS DE ULTRAMAR EN LA HISTORIA Y EN LA LITERATURA

Muy alto y poderoso sentildeor por las letras que a vuestra magestad e escrito a visto el tenor que siempre en este my negocio e tenido agora que veo el peligro que tanto tiempo lo e esperado torno a suplicar lo mismo que asta agora e echo y es que por permisioacuten de dios y por el deudo y sangre que entre vuestra magestad y my ay quiero de vos es-pecial memoria del peligro en que estoy y de los ynconvenientes que se espera allende que dios muy grande mire para ofendido si el Rey my sentildeor pone en efecto lo que todo este reyno tome en este parlamento de todo lo que para estar informado vuestra magestad por su embaxa-dor que aquiacute reside para el remedio tengo esperanza en dios bastaraacute lo que vuestra alteza proveeraacute conque se aga con tiempo no tengo maacutes que decir sino que todo ese reyno y maacutes los perlados y doctas personas que en esta causa defienden estaacuten muy sentidos de la dilacioacuten que su santidad del papa en este negocio a dado y quexanse mucho dello pues por vuestra parte nunca sino justicia se le a demandado y estaacuten el diacutea de oy tan firmes como asta agora para averlo de declarar donde fueren y debe ser entyendese esto poniendo la question como puacuteblicamente se platica que para en lo secreto no ay necesidad de ablar en ello y crea vuestra magestad de que esta verdad y dios me sostienen porque para proseguir mis trabajos no vastaraacute cuerpo humano y confiando en eacutel le suplico guarde la vida de vuestra magestad y acreciente su estado como yo deseo Degramache a 11 de enero= Humilde tiacutea de vuestra magestad= Catalina (RAH Atoacutegrafo precioso Caja 3 Nuacutem 23 Dontildea Catalina de Aragoacuten Reina de Inglaterra Antildeo 1530 Carta al emperador Carlos V pidieacutendole proteccioacuten)

La pobre Catalina presagiaba su triste fin ya que seis antildeos despueacutes la que fuera hija menor de los Reyes Catoacutelicos pasariacutea a mejor vida El no haber podido dar un hijo he-redero al rey Enrique VIII hizo que eacuteste se casase con Ana Bolena declarando nulo su matrimonio anterior sin consentimiento del Papa Roma le excomulgoacute pero eacutel mismo se proclamoacute jefe de la iglesia anglicana A pesar de todo Catalina muere enamorada de su marido y estas uacuteltimas liacuteneas con las que termina su uacuteltima carta y su vida son sufi-cientemente expliacutecitas laquoJuro que sobre todas las cosas mis ojos desean volver a verosraquo (Ximeacutenez de Sandoval 131)

Pese a la enorme influencia directa o indirecta que Erasmo tuviese sobre los pensado-res de la Espantildea del siglo XVI no debemos dejar de destacar tambieacuten la de Fray Luis de Leoacuten tanto por su cariz independiente como por ser un defensor de la libertad indivi-dual Auacuten siendo un representante de la iglesia Catoacutelica tuvo como se sabe que sufrir sus criacuteticas y el rechazo a la exposicioacuten de sus ideas escritos y traducciones biacuteblicas Fray Luis en su obra La perfecta casada deja clara su idea sobre la mujer y la funcioacuten que eacutesta debiacutea ocupar en la sociedad que le tocoacute vivir Para Fray Luis la mujer no era una imagen idealizada del laquoamor corteacutesraquo como la de los escritores neoplatoacutenicos sino un ser de carne y hueso con derechos y responsabilidades en la sociedad de igual manera que el hombre (McKendric 10)

Seriacutea exagerado afirmar que Fray Luis de Leoacuten pone a la mujer por encima del hom-bre en el contexto social Sin embargo y siempre teniendo en cuenta las limitaciones a

142 JUAN FRANCISCO MAURA

las que su profesioacuten y su tiempo le obligaban procura dejar claro que la mujer (casada) merece todo el respeto y ayuda que sea posible de su marido

Porque aunque es verdad que la naturaleza y estado pone obligacioacuten en la casada como decimos de mirar por su casa y de alegrar y des-cuidar continuamente a su marido de la cual ninguna mala condicioacuten de eacutel la desobliga pero no por eso han de pensar que ellos tienen licencia para serles leones y para hacerlas esclavas antes como en todo lo de-maacutes es la cabeza el hombre asiacute todo este trato amoroso y honroso ha de ser principio del marido Porque ha de entender que es compantildeera suya o por mejor decir parte de su cuerpo (Fray Luis de Leoacuten 21 cap 3)

En el reciente estudio de Mar Martiacutenez Goacutengora Discursos sobre la mujer en el Huma-nismo renacentista espantildeol se presenta esa posicioacuten ambigua del fraile agustino en refe-rencia a la funcioacuten de la mujer en la sociedad renacentista

Fray Luis se opone a la funcioacuten otorgada en la eacutepoca a la mujer de mera imagen pasiva Sin embargo fray Luis totalmente encardinado en la cultura del Renacimiento es consciente de la imposibilidad de ignorar ciertos presupuestos De ahiacute la frecuencia en la que el autor anima a las mujeres a buscar una laquofamaraquo puacuteblica que soacutelo una voz masculina puede proveerles Si la mujer desempentildea perfectamente su funcioacuten de casada el marido recibiraacute honra haciendo posible para ella ser alabada por los miembros de la comunidad (187)

Ya se ha mencionado a Isabel la Catoacutelica como impulsora de toda la empresa ultra-marina pero es precisamente gracias a su influencia cuando se pone de moda entre di-versas damas de su tiempo mdashsiglos XV y XVImdash la praacutectica de ciertos estudios y ciencias Beatriz Galindo conocida popularmente como laquoLa latinaraquo fue la que ensentildeoacute latiacuten a la reina Isabel Dice Juliaacuten Juderiacuteas en su obra La Leyenda Negra laquoA los hombres se unen las mujeres en este afaacuten de saber y vemos a Dontildea Beatriz Galindo maestra de latiacuten de la Reina a dontildea Luciacutea de Medrano que explicoacute los claacutesicos en Salamanca a dontildea Fran-cisca de Lebrija que desempentildeoacute una caacutetedra de retoacuterica en la Universidad de Alcalaacuteraquo (Juderiacuteas 74)

Nos cuenta Eustaquio Fernaacutendez de Navarrete que a la muerte del ceacutelebre Antonio de Nebrija quien a impulsos de la reina catoacutelica publicase la primera gramaacutetica europea en lengua romance su hija Antonia le supliacutea en las clases de filosofiacutea y retoacuterica en la Uni-versidad de Alcalaacute cuando eacuteste se encontraba ya viejo y enfermo (xcvi)

No existe ninguna razoacuten para pensar que las las mujeres de clases maacutes favorecidas que pasaron al Nuevo Mundo no disfrutaran de los mismos beneficios y libertades que sus homoacutelogas peninsulares Seraacute preciacutesamente uno de los hijos del mismo Antonio de Nebrija el doctor Sancho de Lebrija quien se encargue de dar poder a Antoacuten Pareja sastre para que la obra escrita de su padre tanto en latiacuten como en romance se distri-buya y venda laquoasiacute en Indias como en otras partesraquo (AHPS Libro del antildeo 1536 Oficio IV Fragmento de un libro Escribaniacutea Cristoacutebal Becerra Folio Primer tercio del legajo Fe-cha 31 de diciembre) En cuanto a las clases menos favorecidas la monarquiacutea espantildeola se preocupoacute desde un primer momento de alfabetizar a todos sus suacutebditos hembras y varones incluyendo los naturales de los territorios conquistados

143ESPANtildeOLAS DE ULTRAMAR EN LA HISTORIA Y EN LA LITERATURA

La educacioacuten de los indiacutegenas americanos fue una sincera preocupa-cioacuten de los reyes de Espantildea casi desde el descubrimiento del Nuevo Mundo Entre las primeras instrucciones de los Reyes Catoacutelicos a sus gobernadores de las Islas Antillas figuran las dadas a Nicolaacutes de Ovan-do en 1503 ordenaacutendole levantar en cada pueblo una escuela junto a la iglesia laquoen la que todos los nintildeos que hubiere en cada una de dichas poblaciones se junten dos veces al diacutea para que alliacute el capellaacuten les ensentildee a leer y a escribirraquo (Vega 9-10)

En la obra renacentista de Cristoacutebal de Villaloacuten El Crotaloacuten se ofrecen unas imaacutegenes muy graacuteficas de las mujeres de la eacutepoca y del laquoexceso de libertadraquo que seguacuten el autor en boca de uno de sus personajes disfrutaban Desde el punto de vista antropoloacutegico y social las siguientes liacuteneas ofrecen una buena imagen de la apariencia fiacutesica de las mujeres de su tiempo y de su actitud vista desde la perspectiva parcial del personaje de la obra

Pues aun no pienses Demophon que la vanidad y perdicioacuten destas livianas mujeres se le ha de pasar a Dios sin castigo que yo te oso afirmar por cosa muy cierta y que no faltaraacute Que por ver Dios su disolucioacuten desenvoltura desverguumlenza y poco recogimiento que en ellas en este tiempo hay visto que asiacute viacutergenes como casadas viudas y solteras todas por un comuacuten viven muy suelta y muy disolutas en su mirar andar y meneo muy curiosas y que por la calle van con un cu-rioso paso en su andar descubierta su cabeza y cabello con grandes y deshonestas crenchas muy alto y estirado el cuello guintildeando con los ojos a todos cuantos topan haciendo con sus cuerpos lascivos meneos (Villaloacuten 860-61 vol 2 canto 20)

El pasaje antes citado pese a parecer humoriacutestico en nuestros diacuteas no lo era tanto en la eacutepoca en que fue escrito ya que la visioacuten de la mujer como parte integrante del pa-trimonio del padre o del marido podiacutea de alguna manera poner en juego laquola honraraquo de su posesor Pese a esto se aprecia como la mujer teniacutea cierto margen de libertad que no se limitaba a las caacutemaras de un convento o a una vida totalmente alejada del mundanal ruido En la siguiente cita continuacioacuten de la anterior se puede observar la serie de ac-cesorios y aderezos que las mujeres de la eacutepoca utilizaban en sus vestidos y cuerpos llamando la atencioacuten la complejidad y sofisticacioacuten de los atuendos descritos

Por esta su comuacuten deshonestidad se cierto que vendraacute tiempo en el cual ha de hacer Dios un gran castigo en ellas pelarse han todos sus cabellos hacieacutendolas a todas calvas y seraacute tiempo en que les quitaraacute Dios todos sus joyeles sortijas manillas zarcillos collares ajorcas y apretadores de cabeza Quitarles ha los partidores de crenchas tenaci-cas salsericas redomillas y platericos de colores y todo geacutenero de afei-tes sahumerios guantes adobados sebos y unturas de manos y otros olores Alfileres agujas prendedores Quitarles ha las camisas muy del-gadas y los manteos vasquintildeas briales saboyanas nazarenas y rebo-cinos y en lugar de aquellos sus cabellos encrespados y enrifados les daraacute pelambre y calvez y en lugar de aquellos apretadores y joyeles

144 JUAN FRANCISCO MAURA

que les cuelgan de la frente les daraacute dolor de cabeza y por cinta de ca-deras de oro muy esmaltadas y labradas les daraacute sogas de muy aacutespero esparto con que se cintildean y aprieten y por aquellos sus muy curiosos y suntuosos ataviacuteos de su cuerpo les daraacute siacutelici y desta manera haraacute Dios que lloren su lascivia y desorden y que de su lujuria y deshonestidad hagan grave penitencia Entonces no habraacute quien las quiera por su he-diondez y miseria en tanto que siete mujeres se encomendaran a un varoacuten y eacutel de todas huiraacute menospreciaacutendolas y aborrecieacutendolas como de gran mal (Villaloacuten 860-61 vol 2 canto 20)

Excelente lista de aderezos femeninos de los cuales pocos son reconocibles en nues-tros diacuteas Gran frustracioacuten debiacutea de tener con las mujeres el autor de estas liacuteneas sien-do al parecer muy poco correspondido por estas uacuteltimas La misoginia que aparece en estas liacuteneas refleja cierta ingenuidad La mujer que se nos presenta debioacute de ser bastante atractiva y sofisticada portando una gran variedad de adornos muchos de ellos de origen oriental y de perfumes que poco tendriacutean que envidiar a los de la mujer moderna En Descripcioacuten breve de toda la tierra del Peruacute Tucumaacuten Riacuteo de la Plata y Chile obra escrita en Chile entre 1603 y 1609 por el padre Reginaldo de Lizarraga nacido en Medelliacuten (Espantildea) en 1545 y trasladado a Ameacuterica a los quince antildeos vemos una asombrosa semejanza con la cita anterior En esta obra del padre dominico dedicada al entonces presidente del Consejo de Indias conde de Lemos observamos coacutemo su descripcioacuten de la vestimenta de las mujeres de Lima ofrece notables semejanzas con la escrita unos antildeos antes en Espantildea En su capiacutetulo 51 titulado laquoDe los vestidos de las mujeresraquo dice lo siguiente

Lo que en esta ciudad [Lima] se admira mucho y aun lo que se ha-biacutea de refrenar es los vestidos y trajes de las mujeres son en esto tan costosas que casi no se sabe como lo pueden sufrir sus maridos La soberbia de ellas es demasiada y no sabemos en lo que han de venir a parar plegue a Dios y no sea en lo que pararon aquellas de quien dice Nuestro Sentildeor Porque las hijas de Sioacuten se ensoberbecieron (esto es las ciudadanas) cuando saliacutean de sus casas llevaban las gargantas ex-tendidas los ojos altos a una y otra parte guintildeaacutendolos los pasos muy compuestos el Sentildeor las volveraacute calvas y les raeraacute los cabellos de sus cabezas les quitaraacute sus chapines y jerbillas bordadas las medias lunas rodetes las cadenas y collares de oro las ajorcas los tocados costosos los punzones de oro para partir las crenchas los zarcillos y los olores los anillos y piedras preciosas etc y por los olores seles daraacute muy pes-tilencial olor y por las cintas de oro sogas de esparto etc No creo yo hay en lo descubierto del mundo ciudad en su tanto ni cuatro veces mayor que a tanta soberbia en este particular como esta nuestra ciu-dad [Lima] llegue acueacuterdome que los antildeos pasados maacutes ha de treinta y ocho que llegando un religioso nuestro de Espantildea nacido y criado en Toledo a nuestro convento de esta ciudad cerca de la fiesta de Cor-pus Christi tratando de ella y de la suntuosidad majestad y riqueza que aquel diacutea en Toledo en calles y ventanas se mostraba le deciacuteamos que no nos espantase porque en nuestra ciudad veriacutea coacutemo no le ha-

145ESPANtildeOLAS DE ULTRAMAR EN LA HISTORIA Y EN LA LITERATURA

ciacutea mucha ventaja Toledo Llegoacute la fiesta vio la riqueza que se mostroacute en los vestidos de las mujeres adornos de ventanas altares y calles dijo que la riqueza de Toledo en este diacutea mostrada no haciacutea muchas ventajas a la de esta ciudad Pues es cierto que hay tanta diferencia de entonces ahora en lo que vamos tratando como de vestidos de aldea a vestidos de corte con justo tiacutetulo se podriacutea moderar por los virreyes esta soberbia pero no seacute por queacute no se modera y siacute seacute por queacute ni los maridos no tienen aacutenimo para moderarlo ni los gobernadores tampo-co (Lizarraga 38 lib 1 cap 51)

Seriacutea injusto y exagerado afirmar que los descubrimientos transoceaacutenicos se hicieron por la presioacuten que ejercieron las mujeres sobre sus amantes para que estos les trajesen laquomaacutes raacutepidamenteraquo todo ese laquosin finraquo de delicadezas exoacuteticas de todo tipo que existiacutean en el Oriente Lo que siacute es cierto es que las mujeres fueron grandes consumidoras de perfumes afeites sedas joyas y otros bienes suntuarios siendo muy conscientes de lo que hoy entendemos como laquomodaraquo Martiacuten Fernaacutendez de Navarrete en su indispensa-ble trabajo sobre los primeros viajes transoceaacutenicos Coleccioacuten de los viajes y descubrimien-tos menciona de paso la situacioacuten de algunas mujeres durante el siglo XV Es precisa-mente esta eacutepoca en la cual portugueses y castellanos entran en conflicto por el control de algunas posesiones en las costas africanas

y crecioacute el lujo a tal extremo que aun las mujeres de los menestrales y artesanos se confundiacutean en los vestidos con las de alto linaje y esta-do usando ropas de ricas telas de seda de oro de lana con forros de martas y pieles y con guarniciones de oro plata y aljoacutefar cuyo gasto por ser ruina de las familias se tratoacute de corregir aunque sin efecto en las Cortes de Palenzuela (M Fernaacutendez de Navarrete 75 21)

El mismo autor resalta la importancia que tuvo para el comercio de Castilla el contar con una buena armada que protegiese a los barcos de piratas y otros peligros Gracias a los inventarios que se han conservado del duque de Beacutejar y de don Alvaro de Zuacutentildeiga conocemos el lujo de estos sentildeores en perlas orientales piedras preciosas telas y demaacutes utensilios de gran valor134 Existe una Real Pragmaacutetica de Fernando el Catoacutelico a Diego Coloacuten en donde aparece nuevamente la conciencia que se teniacutea sobre la manera de ves-tir que deberiacutean llevar las damas castellanas

R PRAGMAacuteTICA SOBRE EL VESTIR Y GASTAR SEDA EN LAS IN-DIAS Valladolid 12 de noviembre de 1509 Don Fernando etc A vos Don Diego Coloacuten nuestro Almirante y Gobernador de las Indias del mar Oceacuteano y a otro cualquier mi Gobernador etc Sepades que yo he sido informado de los muchos gastos y costas que se han hecho y facen y se esperan hacer si yo no lo mando proveer y remediar en el vestir y gastar de las sedas y brocados y bordados en la Isla Espantildeola y en las otras islas y poblaciones de las dichas islas del mar Oceacuteano tra-yendo en ello mucho desorden y yo por el amor y voluntad que tengo

134 AGI Indiferente 418 Libro 2 fol 87v Publicada en DH Am Tom 6 paacutegina 191 DIA Tomo 31 pag 470 DIU Tomo 5 paacuteg 166 Seguacuten la RC a Diego Coloacuten fechada a 14 de noviembre de 1509 es la pragmaacute-tica que se guarda en Castilla sobre la manera de vestir (DIU Tomo 5 paacutegina 174)

146 JUAN FRANCISCO MAURA

a esas dichas Indias y a los pobladores dellas y porque deseo que ellas se aumenten y acrecienten por las haber ganado y descubierto por la gracia de Nuestro Sentildeor con nuestra industria trabajo y costa y los po-bladores dellas no hagan sobre lo suso dicho tan excesivos gastos sino pues que van a ellas con deseo y voluntad de se ayudar y aprovechar del oro que por gracia de Nuestro Sentildeor se descubre de cada diacutea se detengan en lo gastar en semejantes cosas para se aprovechar dellos en otras cosas que maacutes les convenga asiacute para sus personas como para sus haciendas y por evitar y excusar lo suso dicho mandeacute lo platicar con algunos de mi Consejo y por ellos visto se halloacute que porque nuestros suacutebditos y naturales que viven y estaacuten en dichas Indias no gasten sus haciendas en semejantes desoacuterdenes y que las conserven y guarden pa-ra sus menesteres y por el bien y el pro comuacuten de todos generalmente mando dar esta mi carta premaacutetica sancioacuten la cual quiero y mando que haya fuerza y vigor de ley bien ansiacute y a tan cumplidamente como si fuese fecha y promulgada en Cortes por lo cual ordeno y mando que en cuanto a mi merced y voluntad fuere ninguna ni algunas personas de cualquier ley estado condicioacuten que sean que estuvieren de morada o vivienda o en otra cualquier manera en la dicha Isla Espantildeola y en las otras islas desas dichas Indias y tierra firme no puedan traer y traigan ropa alguna de brocado ni de seda ni de chamelote de seda ni zarzahaacuten ni tercenel ni tafetaacuten ni vainas ni correas de espada ni en cinchas ni en sillas ni en alcorques ni en cosa alguna ni tampoco puedan traer ni trai-gan bordados de seda ni chapado de plata ni de oro de martillo ni fila-do ni tejido ni de otra cualquier manera pero que las personas que tu-vieren en las dichas Indias bienes asiacute muebles como raiacuteces que valgan hasta la cuantiacutea de mil castellanos que ellos y los hijos que tuvieren de hasta edad de catorce antildeos traigan jubones y caperuzas y bolsas y ribe-tes y pestantildeas de seda de cualquier color que quisieren con tanto que en una ropa no traigan maacutes de un ribete y que no haya en los dichos ribetes y pestantildeas maacutes anchura de cuanto un dedo pulgar y que no se traiga en los ruedos de las ropas y que puedan traer becas de tercenel y de tafetaacuten y de papahigos de camino aforrados en el mismo tercenel y tafetaacuten y ansiacute mismo permitimos que puedan traer de seda las cora-zas y guarnecer las faldas y gocetes y capacetes y baberas y quejotes y traer cojines de seda en la silla de la jineta y que las mujeres de las tales personas que tuviesen bienes en la dicha cuantiacutea de los dichos mil castellanos y sus hijas siendo doncellas puedan traer gonetes y corseacutes y fajas de dos varas de largo de seda y [borradas dos letras por mancha de tinta] mas y de lo de vestir y mudar cuando quisieren y por bien tuvieren quier sea moyil o faldilla o cota o haacutebito u otra cualquier ropa con tanto que juntamente no puedan vestir ni vistan maacutes de una ni les pongan trepas ni tiras de seda ni de brocado ni de oro tirado ni tejido ni relido ni en las ropas de pantildeo pongan cortapisas ni lisonjas ni trepas ni tiras ni otra guarnicioacuten alguna de seda ni de brocado salvo que puedan traer un ribete o pestantildea de seda de anchura de un dedo pulgar asiacute en

147ESPANtildeOLAS DE ULTRAMAR EN LA HISTORIA Y EN LA LITERATURA

las ropas de seda como en las de pantildeo en los ruedos de las faldas y para las costuras y no otra cosa alguna y que no traigan la dicha seda en las guarniciones de las mulas ni en angarillas ni en sillas ni en pantildeos ni en otra cosa alguna y que ansiacute mismo no puedan traer mantillas de seda ni enforradas en seda sopena que l que contrario hiciere pierda las ro-pas que ansiacute trujere vestidas por primera vez y sea repartido la mitad para el juez que lo juzgare y la otra mitad para el juez que lo acusare y por la segunda que pierda la ropa y se parta como dicho es y sean desterrados de la isla donde viviere para dos antildeos y por cuanto algu-nas personas de los que nuevamente destos reinos de Castillaa van a se avecindar y poblar y estar en las dichas Indias y son de honra acae-ce que no llevan tantos bienes que valgan la dicha cuantiacutea de los mil castellanos que mando que tengan los que hubieren de traer seda en la manera que dicha es que a eacutestos tales no se entienda y extienda lo suso dicho y que puedan traer la dicha seda seguacuten y en la manera que dicha es y no maacutes hasta tanto que haya un antildeo que estaacuten en las dichas Indias que corra y se cuente desde el diacutea que llegare fasta ser cumplido y que siacute cumplido no tuviere bienes que valgan la dicha cuantiacutea de los dichos mil castellanos que no puedan traer seda ninguna so la dicha pena de suso contenida la cual mando a vos las dichas nuestras justi-cias y a cada una de vos que esta mi carta y todo lo en ella contenido y cada cosa y parte dello guardeacuteis y cumplaacuteis y ejecuteacuteis por manera que se cumpla y ejecute lo en ella contenido so pena de perdimiento de los oficios y que seades inhaacutebiles para haber otros semejantes y que pagueis la estimacioacuten de la tal ropa que dejardes de ejecutar y para que lo susodicho sea notorio y ninguno dello pueda pretender ignorancia mando que esta mi carta sea pregonada puacuteblicamente por las plazas y mercados y otros lugares acostumbrados desas dichas islas por prego-nero y ante escribano puacuteblico(Konetzke Coleccioacuten 23)135

Tambieacuten se sabe de las joyas que Rodrigo Ponce de Leoacuten marqueacutes de Caacutediz debioacute dar a dontildea Beatriz Pacheco (M Fernaacutendez de Navarrete 75 22) Lo que siacute queda claro es que la navegacioacuten seraacute a partir de estos antildeos la forma maacutes raacutepida e importante para comerciar con aquellos paiacuteses de Oriente que antes soacutelo era posible alcanzar a traveacutes de rutas terrestres Existe un documento muy representativo de este periodo sobre la posesioacuten de joyas de gran valor por parte de miembros de una de las familias maacutes repre-sentativas residentes en Ameacuterica Los protagonistas son en este caso el almirante Diego Coloacuten y su mujer Mariacutea de Toledo Dice el documento que El jurado Antoacuten Bernal y Juana de Hoces su mujer vecinos de Sevilla en la collacioacuten de Santa Cruz reciben de Diego Coloacuten Almirante de las Indias laquoun joyel muy rico de oro de hechura de escudo que tiene en medio una piedra preciosa grande esmeralda e debaxo de la dicha piedra un rostro de aacutengel labrado en el mismo oro esmaltado e a cada lado del dicho rostro una piedra preciosa diamante pura y debaxo una piedra gruesa pendiente que pesa el dicho

135 AGI Indiferente 418 Libro 2 fol 87v Publicada en DH Am Tom 6 paacutegina 191 DIA Tomo 31 pag 470 DIU Tomo 5 paacuteg 166 Seguacuten la RC a Diego Coloacuten fechada a 14 de noviembre de 1509 es la pragmaacutetica que se guarda en Castilla sobre la manera de vestir (DIU Tomo 5 paacutegina 174)

148 JUAN FRANCISCO MAURA

joyel con todo lo susodicho medio marcoraquo Los citados Antoacuten Bernal y su esposa se dan por pagados de todo lo que se les adeudaba y se obligan a su vez a devolver el joyel al Almirante si este les paga en dinero El 23 de agosto de 1530 siete antildeos despueacutes la virreina canceloacute la anterior obligacioacuten y recuperoacute el mencionado joyel (AHPS Libro del antildeo 1523 Oficio I Escribaniacutea Alonso de la Barrera Folio 1173 Fecha 3 de diciembre) En la misma casa del almirante otra mujer Briolanga Muntildeiz su tiacutea materna se obliga a pagar al mercader genoveacutes Batista Catantildeo 22 ducados de oro laquopor cierto raso que le comproacute y habiacutea de ser pagado en el puerto de Santo Domingoraquo (AHPS Libro del antildeo 1509 Oficio V Libro uacutenico Escribaniacutea Francisco Esquibel Folio Primer tercio del lega-jo Fecha 9 de marzo) Dontildea Briolanga recibiacutea cada antildeo para su mantenimiento 100000 maravediacutes del almirante mayor de las Indias por medio de Gaspar Gurricio monje del monasterio de Santa Mariacutea de las Cuevas (AHPS Libro 1510 Oficio XV Libro II Es-cribaniacutea Bernal Gonzaacutelez Vallesillo Folio primer tercio del legajo Fecha 4 de julio) Resulta interesante hacer notar la temprana presencia (1516) de un ingleacutes en Santo Domingo involucrado igualmente en la compra de telas Se trata de laquoNicolas Arnoteraquo residente en Santo Domingo que debe pagar a Mariacutea Caldera mujer del comendador Diego Barbosa el valor de una cama de sargas de colores de Flandes (AHPS Libro del antildeo 1516 Oficio XV Libro II Escribaniacutea Bernal Gonzaacutelez Vallesillo Folio Primer tercio del legajo Fecha 28 de agosto) Sin embargo anteriormente a esa fecha (1514) encontramos a un veneciano casado con una inglesa mucho maacutes ceacutelebre en sus viajes trasoceaacutenicos laquoSevastiaacuten Cavotoraquo capitaacuten del rey don Fernando y vecino de Sevilla136

De forma paralela se observa tambieacuten un cierto desenvolvimiento de la mujer en su medio lo que equivaliacutea a intercambios de informacioacuten a todos los niveles incluyendo por lo tanto el cultural No era extrantildeo que tuviesen libros de comedias a mano y que llegasen incluso a escribir comedias ellas mismas Efectivamente la sospecha de que las damas llegasen a escribir comedias estaba bien fundada Veacuteanse algunos ejemplos Ana Caro Malleacuten de Soto una de las maacutes famosas dramaturgas de la Sevilla del siglo XVII autora de El conde de Partinupleacutes utiliza el tema del amor en sus maacutes diversas variantes fiacutesicas y espirituales como el eje de casi todas sus obras (Perry 57) Este hecho por otra parte indica el favor del puacuteblico ante un tema tan popular Veacutease otro ejemplo

The drama of this period did not present love and marriage as a simple partnership however and many dramatists contrasted laquoprofaneraquo with laquohonestraquo love Feliciana Enriacutequez de Guzmaacuten who wrote Tragicome-dia Los jardines y campos sabeos in Seville in the early seventeenth cen-tury presented the hero Clarisel as the victim of laquopervertedraquo and fickle Belidiana in part 1 so blinded by her beauty that he feels himself laquoin shackles and in chainsraquo (Perry 57)

Pero las damas espantildeolas de esta eacutepoca no soacutelo escribiacutean comedias algunas tambieacuten se aventuraron a escribir tratados cientiacuteficos Uno de estos casos fue el de Oliva Sabu-co de Nantes Barrera que a finales del siglo xvi escribioacute un tratado meacutedico sobre la naturaleza humana advirtiendo que la lujuria podiacutea perjudicar al cuerpo Se basaba en

136 Sebastiaacuten Caboto o laquoSevastiaacuten Cavotoraquo estaba casado con Juana Cavoto vecina que fue de la ciudad de Londres en la parroquia de San Gil (AHPS Libro del antildeo 1514 Oficio I Libro II Escribaniacutea Mateo de la Cuadra Folio 253 Fecha 14 de Septiembre) citado en CFAAPS Vol 3 doc 128 p 37

149ESPANtildeOLAS DE ULTRAMAR EN LA HISTORIA Y EN LA LITERATURA

la presuncioacuten de que la lujuria provocaba que el cerebro emitiese un liacutequido que iba al estoacutemago enfriaacutendolo y debilitaacutendolo interrumpiendo de esta manera las funciones vitales (Perry 58)

Se sabe que en la eacutepoca de Isabel la Catoacutelica habiacutea muchas mujeres estudiantes y que la propia reina las impulsaba a estos menesteres iniciativa que obtuvo sus frutos en las deacutecadas siguientes Ademaacutes de las conocidas novelistas Mariacutea de Zayas y Sotomayor y dontildea Mariana de Carvajal existioacute toda una serie de escritoras de todos los geacuteneros lite-rarios que florecieron a ambos lados del Atlaacutentico y que no solamente llaman la aten-cioacuten por su nuacutemero sino por la calidad de sus obras Algunas de ellas como dontildea Luisa de Padilla condesa de Aranda calificada por Serrano y Sanz como laquola maacutes notable de cuantas florecieron en Espantildea en el siglo XVIIraquo personificaraacuten a la perfeccioacuten a este tipo de mujeres Tambieacuten deberiacuteamos saber cuaacutentas seriacutean las mujeres que escribieron con pseudoacutenimos masculinos

La informacioacuten sobre las diferentes facetas de la vida femenil con que contamos no es abundante A pesar de todo podemos hacernos una idea maacutes clara de la verdadera situacioacuten de la mujer a traveacutes de una nueva interpretacioacuten de los textos tanto de los medievales como de las croacutenicas de los primeros antildeos del descubrimiento y conquista Algunos estudios relativamente recientes surgidos por el intereacutes general que suscita todo lo concerniente a la mujer han ayudado a considerar nuevas perspectivas La eru-dicioacuten moderna estaacute poniendo en tela de jucio los estereotipos tradicionales en cuanto a la pasividad y relevancia femeninas asiacute como al tradicional misogenismo que se atri-buye a la eacutepoca medieval Cada vez estaacute maacutes claro que la existencia de estas mujeres variaba considerablemente seguacuten la eacutepoca posicioacuten social o situacioacuten geograacutefica por lo que hacer valoraciones categoacutericas sobre laquola situacioacuten de la mujerraquo puede llevar a graves equivocaciones (Dillard 9) Es fundamental para comprender a la mujer espa-ntildeola que pasoacute al Nuevo Mundo tener en cuenta las enormes diferencias de todo tipo que existieron en la sociedad castellana y novomundista Un pintoresco ejemplo es el de laquolas tapadasraquo una usanza de origen aacuterabe que se pondriacutea de moda en Castilla poco despueacutes de la toma de Granada por los Reyes Catoacutelicos y que despueacutes pasariacutea al Peruacute Esta tradicioacuten ha perdurado en algunos pueblos de Espantildea hasta relativamente poco tiempo pueblos como Mojaacutecar (Almeriacutea) y Vejer de la Frontera (Caacutediz) son ejemplo de esta costumbre tambieacuten conocida como el de las laquocobijaacutesraquo

Tras la caiacuteda del reino musulmaacuten de Granada en 1492 la corona espa-ntildeola prohibioacute a las mujeres aacuterabes de Andaluciacutea vestir los velos islaacutemi-cos que cubriacutean sus rostros y ocultaban su identidad No era faacutecil des-arraigar esta costumbre tan ancestral y secular y el emperador Carlos asiacute como su hijo el rey Felipe II tuvieron que repetir la prohibicioacuten Cuando finalmente las moras fueron obligadas a abandonar sus velos y a adoptar el chal castellano comenzaron a utilizar la nueva prenda para cubrir sus rostros dejando al descubierto soacutelo uno de los ojos Esta nueva moda en el uso del chal tradicional nos asegura leoacuten Pi-nelo era extremadamente graciosa sensual y atractiva a causa de la belleza exoacutetica de los ojos de las moras Las mujeres cristianas de Granada Coacuterdoba y Sevilla imitaron pronto la nueva moda de llevar el chal y asiacute nacioacute la laquotapadaraquo hispana Desde Sevilla la nueva moda

150 JUAN FRANCISCO MAURA

fue a las colonias de ultramar y tomoacute raices especialmente en el Peruacute (Martiacuten 317-18)

En un reciente estudio sobre la educacioacuten de la mujer en la Ameacuterica virreinal apare-cen algunos ejemplos significativos de mujeres espantildeolas que consagraron gran parte de sus vidas a la tarea docente Dentro del proceso educativo de las espantildeolas que fueron a las Indias destaca el papel de dontildea Catalina de Bustamante Joseacute de Jesuacutes Vega y Ma-riacutea Luisa Caacuterdenas de Vega dicen en su obra Ameacuterica Virreinal La Educacioacuten de la mujer que esta mujer pocos antildeos despueacutes del descubrimiento del Nuevo Mundo se dedicoacute a trabajar en favor de los indios aunque por desgracia su nombre y sus hechos en la labor docente hayan sido ignorados por los historiadores modernos (Vega 12-13)

Son varias las veces que se nombra a Catalina de Bustamante en el citado estudio y varias las fuentes antiguas en que se recoge la presencia de tan distinguida laquomatrona muy honrada y de buen ejemploraquo de la que ya hablaba Zumaacuterraga y sobre la que se hizo un informe enviado a Carlos V describiendo sus actividades en la Nueva Espantildea firmado por cuatro de los misioneros maacutes conocidos de Meacutexico

El informe dice que los franciscanos de Texcoco acababan de cons-truir un nuevo monasterio y cedido el antiguo A una honrada y honesta y muy virtuosa matrona que se dice Catalina de Bustamante para que ende instruyese a las hijas de los sentildeores de la comarcala cual con el favor de Dios y limosnas que don Hernando [Corteacutes] les haciacutea para su sustentacioacuten [teniacutea en esa casa-hogar] hasta trescientas mujeres antes maacutes que menos (Vega 14)

Estas laquocasas-hogarraquo no estaban regentadas necesariamente por monjas sino por lo que llamaban laquobeatasraquo mujeres que sin estar estar sujetas a la autoridad eclesiaacutestica se dedicaban a un laquolucro honestoraquo Llamadas tambieacuten laquobeateriosraquo eran diferentes a los conventos de monjas y constituiacutean las primeras escuelas de la mujer en la Nueva Espa-ntildea (Vega 20-21) Fue gracias al ejemplo de mujeres como Catalina de Bustamante que dedicaron sus vidas a la educacioacuten de los indiacutegenas que existiesen otras continuando su ejemplo Motoliniacutea dice claramente que laquode ese primer encerramiento (el de Texcoco regentado por Catalina) salieron otras honestas y muy virtuosas duentildeas que ensentildeaban a las maacutes menudasraquo (Vega 23)

Pero dontildea Catalina de Bustamante pese a ser una singular mujer y la iniciadora de la educacioacuten de la mujer en Meacutexico no fue un caso aislado corresponde maacutes bien a un patroacuten al que se ajustaron muchas de las pioneras de la Nueva Espantildea que sembraron instituciones de educacioacuten de la mujer En 1530 unos antildeos maacutes tarde aparecioacute una de las grandes protectoras de la instruccioacuten femenina en Ameacuterica La emperatriz Isabel de Portugal (Vega 24)

Desde comienzos de la conquista fueron varios los centros docentes regentados por mujeres en los que la ensentildeanza no estaba impartida por monjas Una de las institucio-nes maacutes sobresalientes del sistema educativo fue el Colegio de Nintildeas que se establecioacute en la ciudad de Meacutexico a principios del siglo XVI con maestras que no eran monjas Estas seglares conocidas comunmente como laquomigasraquo eran las descendientes de las antiguas beatas Su ubicacioacuten permanente fue determinada en 1548 lugar que serviriacutea de escue-la ininterrumpidamente hasta 1862 cuando el edificio fue convertido en bodega (Vega 60) No se debe perder de vista que no soacutelo por el hecho de llevar una vida secular se

151ESPANtildeOLAS DE ULTRAMAR EN LA HISTORIA Y EN LA LITERATURA

gozaba de maacutes privilegios Era maacutes bien al contrario En las carreteras las mujeres segla-res no inspiraban el mismo respeto que las monjas que ademaacutes teniacutean contacto cons-tante con personas de los dos sexos no pertenecientes a la Iglesia (Arenal 297) Ademaacutes dentro de las murallas del convento desapareciacutean muchas de las barreras sociales que limitaban a la mujer de esta eacutepoca

La presencia femenina y la monarquiacutea

Pues iquestcoacutemo sabes tuacute preguntoacute don Quijote que los grandes llevan detraacutes de siacute a sus caballerizos Yo seacute lo direacute respondioacute Sancho Los antildeos pasados es-tuve un mes en la corte y alliacute vi que paseaacutendose un se-ntildeor muy pequentildeo que deciacutean que era muy grande un hombre le seguiacutea a caballo a todas las vueltas que daba que no pareciacutea que era su rabo Pregunteacute que coacutemo aquel hombre no se juntaba con el otro sino que siempre anda-ba tras deacutel Respondieacuterome que era su caballerizo y que era uso de grandes llevar tras siacute a los tales Desde enton-ces lo seacute tan bien que nunca se me ha olvidado (Cervan-tes Don Quijote)

Los monarcas espantildeoles fueron conscientes de que sin la presencia femenina difiacute-cilmente se podriacutea solidificar una conquista a todos los niveles La mayor parte de los virreyes y altos cargos trajeron a sus mujeres con ellos y en las ciudades principales de Hispano-Ameacuterica como la ciudad de Meacutexico Guatemala Lima o Potosiacute habiacutea mujeres que disfrutaban de una esmerada educacioacuten (gramaacutetica latiacuten poesiacutea historia muacutesica) Esto dariacutea origen a una elegante y hasta cierto punto sofisticada sociedad en la que las mujeres tomaron parte en asuntos maacutes importantes que los que sus homoacutelogas toma-ran en las colonias portuguesas laquoThere were brilliant vice-regal courts at Mexico City and Lima far exceeding anything that could be found in Portuguese or English America during the seventeenth centuryraquo (Boxer 39) Las estadiacutesticas con las que contamos hoy no soacutelo demuestran que las mujeres llegaron al Nuevo Mundo en respetables porcen-tajes sino que ademaacutes tuvieron una participacioacuten activa llegando a intervenir en algu-nos casos en las liacuteneas de vanguardia Resulta difiacutecil aproximarse al estado de aacutenimo de aquellas mujeres que vivieron en eacutepocas tan lejanas Para ello es necesario indagar en los documentos de la eacutepoca para lograr rescatar del pasado todos esos tesoros de la historia muchas veces tergiversados y manipulados con el fin de que sirvan a propoacutesi-tos actuales Es en los viejos manuscritos donde queda testimoniada su presencia tan rica en dolores tragedias y por queacute no en amores Fue la llegada de estas mujeres una brisa de esperanza y de ilusioacuten para aquellos que ya estaban en las tierras de ultramar y

152 JUAN FRANCISCO MAURA

veiacutean venir de su propia tierra aquello que maacutes antildeoraban amantes madres hermanas Un haacutelito de vida y poesiacutea que suavizaba las costumbres de estos rudos y romaacutenticos pioneros laquoporque para ser hombres de tales empresas algo de romaacutentico debioacute de existir en ellos y que es tan propio del espantildeol y abandonariacutean en brazos tan gentiles sus bruscos modales que habiacutean adquirido en aacutespero contacto en selvas y montantildeasraquo (Villafantildee 125)

Hoy sabemos que en la normativa oficial de la Espantildea del siglo XVI y XVII se favoreciacutea el paso de mujeres al Nuevo Mundo Afirmar lo contrario no solamente es falso sino que implica un desconocimiento total de los primeros dos siglos de la colonizacioacuten espantildeola La presencia de estas mujeres espantildeolas fue efectiva laquolas disposiciones al respecto demuestran claramente que se teniacutea especial intereacutes en su arraigo y que se tra-taba de defender su posicioacuten de mujeres casadas con conquistadores y colonizadoresraquo (Villafantildee 126) Los monarcas comprendiacutean que era praacutecticamente imposible que los hombres viviesen sin mujeres y que de ser asiacute era de esperar que se cometiesen abusos con las indias lo que incidiriacutea en la moral social y en el buen gobierno de la colonia Ademaacutes sin un asentamiento definitivo con hogares y familias difiacutecilmente se podriacutea llevar a cabo una presencia permanente en las nuevas colonias (Orsquo Sullivan-Beare 45)

Empezando por los Reyes Catoacutelicos la preocupacioacuten de que en las colonias se esta-bleciesen nuacutecleos que tuviesen como base la familia cristiana fue clara Las capitulacio-nes que a este efecto se hicieron entre los conquistadores y la Corona fueron nume-rosas La efectuada entre Rodrigo de Baacutestidas y Carlos V puede ser un buen ejemplo Fechada en Valladolid el 6 de noviembre de 1524 muestra el propoacutesito de Baacutestidas de establecer una colonia permanente en la desembocadura del riacuteo Magdalena en el terri-torio que hoy vendriacutea a corresponder a Colombia El documento firmado por el Empe-rador comienza asiacute

El Rey Por cuanto por parte de vos Rodrigo de Baacutestidas vecino de la ciudad de Santo Domingo de la Isla Espantildeola Me fueacute fecha relacioacuten que por servicio de la Catholica Reyna Mi Sentildeora e Nuestro os ofre-ceacuteis de poblar e poblariades la provincia e puerto de Santa Marta que en Castilla de Oro llamada la Tierra Firme e que la poblariades dentro de dos antildeos siguientes haciendo en ella un pueblo en que no menos haya en eacutel al presente cincuenta vezinos que los quince de ellos sean casados y tengan consigo a sus mujeres y que lo teniades fecho dentro de dos antildeos y de hoy en adelante lo maacutes que fuese posible asiacute de cris-tianos espantildeoles como de indios (Restrepo 1 30)

De igual manera el priacutencipe Felipe (futuro Felipe II) en las capitulaciones establecidas en 1547 con Juan de Sanabria para que eacuteste fuese como gobernador y capitaacuten general de la dicha provincia escribe lo siguiente laquoPrimeramente que seais obligado e os obligeis a llevar destos Reynos de Castilla a la dicha provincia del Rio de la Plata cien casados con sus mujeres e hijos para poblar la dicha provincia y con ellos llevareis a vuestra muger e hijos (CDI de Ameacuterica y Oceaniacutea 23 119)

En numerosas ocasiones se pone de manifiesto el apoyo de la monarquiacutea a la emigra-cioacuten femenina tantas que difiacutecilmente se podriacutean enumerar todos los casos Lo cierto es que la legislatura vigente favoreciacutea la emigracioacuten y traslado de mujeres con toda una se-

153ESPANtildeOLAS DE ULTRAMAR EN LA HISTORIA Y EN LA LITERATURA

rie de alicientes137 sobre todo si eacutestas estaban casadas pasaje para llevar a las familias franquicia de derecho para los artiacuteculos que portasen consigo favoritismo en cargos destinos y contrataciones a aquellos que pasasen con sus mujeres incluyendo ademaacutes de los castellanos y leoneses a suacutebditos de otras partes de la corona incluso genoveses y portugueses si estos veniacutean acompantildeados de sus consortes (Fernaacutendez Duro 15-16)

Incluso se llegoacute a imponer penas a aquellos hombres casados que no llevasen a sus mujeres con ellos a Indias en el teacutermino de un antildeo El mismo emperador en una ceacutedula otorgada al virrey de la Nueva Espantildea le recomendaba que laquoprocurase persuadir a ca-sarse a los solteros que estuviesen en edad y situacioacuten de hacerloraquo prometieacutendoles que al efectuar el matrimonio seriacutean preferidos en el reparto de indios En la isla de San Juan de Puerto Rico los cargos oficiales y oficios puacuteblicos debiacutean de ser desempentildeados por los casados en primer lugar En Meacutexico ocurrioacute lo mismo con los cargos de corregido-res (Konetzke laquoemigracioacutenraquo 140-41) Felipe II al igual que sus antecesores y sucesores reiteraraacute y justificaraacute los beneficios de los que seraacuten acreedores aquellos que tengan allaacute a sus mujeres laquoque los que han servido en los descubrimientos de las dichas Indias y tambieacuten los que ayudan a la poblacioacuten dellas que tienen allaacute sus mugeres sean preferi-dos en los aprouechamientos qualesquierraquo mandando que despueacutes de los conquistado-res se tuviera en cuenta para la laquoprovisioacuten de los corregimientosraquo a los colonos casados siempre que estuvieran capacitados para dichos cargos (Konetzke laquoemigracioacutenraquo 141)

Las disposiciones en favor del matrimonio son claras ya sea por medio de un favo-ritismo manifiesto como en los casos antes citados o mediante medidas de cohercioacuten para que esta poliacutetica se llevase a cabo Don Sebastiaacuten Ramiacuterez de Fuenleal obispo de Santo Domingo y presidente de la Audiencia de Meacutexico propuso que a aquellos enco-menderos que no estuviesen casados y que no hubiesen tomado parte en la conquista se les quitase los indios concedidos con la obligacioacuten de devolveacuterselos si en el plazo de un antildeo habiacutean contraiacutedo matrimonio (Konetzke laquoemigracioacutenraquo 142-43) Por supuesto hubo excepciones a estas reglas En algunos casos ni la mujer teniacutea especial intereacutes en vivir junto con su marido en las Ameacutericas ni el marido queriacutea ir a buscar a su mujer pasado el plazo de un antildeo En el presente documento y de forma excepcional las auto-ridades reales protegen a los conyuges para que puedan seguir viviendo separados en continentes diferentes

Nuestras justicias de la ysla de Cubagua e otras qualesquier de las nuestras Yndias yslas e tierra firme del mar oceacuteano e a cada uno e qualquier de vos a quieacuten esta mi ceacutedula fuese mostrada por parte de Alonso de Tapia nuestro veedor de la provincia de Paria me ha sido hecha relacioacuten que ha mucho tiempo que reside en esas partes donde nos ha servido en lo que se ha ofrecido e que agora vos otros le apre-miaacuteis a que venga o embiacutee a estos Reinos por su muger lo cual no puede al presente hazer a causa de no ter posibilidad para ello a mi me ha suplicado vos mandase que no le compeliacuteesedes ny apremiaacutesedes a que viniese o enviase por la dicha su muger y dieacutesedes por libres los fiadores que tenyades para que dentro de un antildeo embiariacutea o verniacutea por

137 Reales Ceacutedulas de los antildeos 1502 y 1503 Academia de la Historia Coleccioacuten Muntildeoz tomo 75 fols 209 y 220 citado por Fernaacutendez Duro 15

154 JUAN FRANCISCO MAURA

ella o como la mi merced fuese lo cual visto por los de nuestro consejo juntamente con una peticioacuten presentada por dontildea Mariacutea Gudiel muger del dicho Alonso de Tapia por la cual nos suplica lo mismo que acor-dado que debiacutea mandar esta mi ceacutedula para vos por la qual vos mando que no compelaacuteis ni apremieacuteis al dicho Alonso de Tapia a que venga ni enviacutee a estos reinos por la dicha su muger si no fuere a que la pro-vea de lo que fuere necesario para su mantenimiento y deys por libres quales quier fianzas que sobre ello haya dado e no fagades ende al por alguna manera Firmado en la villa de Valladolid a VII diacuteas del mes de febrero de mil e quinientos e treinta y siete antildeos yo el licenciado Con-de de Samano y sentildealada del cardenal Beltraacuten y Carbajal [Aparte en letra pequentildea] Este diacutea se despachoacute una provisioacuten por la cuaacutel su Mag hizo merced a Alonso de Tapia de la veedoriacutea de la provincia de Paria por muerte de Garciacutea de Aguilar con las clausulas ordinarias y con el mismo salario que teniacutea Aguilar Firmado del emperador y de Beltraacuten y Bernal y Velaacutezquez El Rey (Registro de disposiciones Riacuteo Marantildeoacuten AGI Indiferente General Legajo 416 libro 2 Fols 94v y 95r)

El punto maacutes interesante a destacar de todas estas disposiciones oficiales en cuanto a la emigracioacuten femenina al Nuevo Mundo no es otro que la libertad que se da a la mujer de decidir si quiere o no casada o sin casar trasladarse al nuevo continente no como una imposicioacuten sino como un precepto laquoel espiacuteritu de las disposiciones en el sentido de asegurar la vida marital de los casados significa que la mujer que su marido invita a pa-sar a las Indias puede negarseraquo (Villafantildee 127) Habriacutea que ver las opciones laquorealesraquo ade-maacutes de las legales y econoacutemicas que le quedaban a la mujer si tomaba esta decisioacuten

El saber la libertad de eleccioacuten que estas mujeres teniacutean de antemano antes de aden-trarse en las interminables penalidades y aventuras que los viajes de la navegacioacuten tran-soceaacutenica suponiacutean hace que sus hechos y esfuerzos cobren auacuten maacutes relieve En nume-rosas ocasiones estas mujeres cruzaron el oceacuteano una y maacutes veces sin otro motivo que el de defender los derechos e intereses de los suyos Lo que resulta maacutes valioso de todo esto es que lo hicieran por propia iniciativa arriesgando sus vidas para que se hiciese justicia y para que no les faltase lo necesario a aquellos que estaban en la otra orilla Las autoridades vigentes conocedoras de los vaciacuteos legales existentes en las nuevas colo-nias se apresuraron a poner en vigor aquellas normas que redundaran en el beneficio de los menos favorecidos por las circunstancias La institucioacuten del matrimonio cuya trans-cendencia es fundamental en la vida juriacutedica y social de la mujer tuvo que ser legislada en Ameacuterica con una serie de nuevas disposiciones agregados modificaciones y aclara-ciones Asiacute pues la legislacioacuten de base espantildeola tuvo que sufrir en tierras americanas esta serie de cambios por motivos poliacuteticos y sociales (Villafantildee 126)

Para hacer un sumario de lo dispuesto hasta el siglo XVI en cuanto a la legislacioacuten de las mujeres que teniacutean familia o intereses en Indias merece la pena mencionar que existieron una serie de disposiciones que protegiacutean a las mujeres para que eacutestas no se viesen abandonadas por sus maridos En un epiacutegrafe de la Recopilacioacuten de 1680 (libro VII tiacutetulo 3) se deja ver claramente la preocupacioacuten de las autoridades en este asunto laquoDe los casados en Espantildea e Indias que estaacuten ausentes de sus mujeres y esposasraquo (Vi-llafantildee 126-27)

155ESPANtildeOLAS DE ULTRAMAR EN LA HISTORIA Y EN LA LITERATURA

La lista de disposiciones se hace interminable En los reinados de Fernando el Catoacute-lico Carlos V Felipe II Felipe III o incluso Carlos II la insistencia es constante La ra-zoacuten de esta insistencia seriacutea bastante obvia dado que con un oceacuteano por medio seriacutean muchos los que se aprovechasen de llevar una doble vida marital sin el estricto control y vigilancia de sus mujeres que se encontraban en la peniacutensula La ley XXVII libro IX tiacutetulo XXVI determina laquoDeclaramos por personas prohibidas para embarcarse y pasar a las Indias todos los casados y desposados en estos reinos lsquosino llevaren con ellos sus mujeresrsquo aunque sean virreyes oidores gobernadores o nos fuesen a servir en cual-quier cargo y oficios de Guerra Justicia y Hacienda porque es nuestra voluntad que todos los susodichos lleven a sus mujeresraquo (Villafantildee 127) laquoLos eclesiaacutesticos eran los en-cargados de dar cuenta a los tribunales competentes de aquellos que estando casados permaneciacutean en Indias sin sus mujeres Son reiteradas las disposiciones de Fernando el Catoacutelico en este sentidoraquo138 En 1514 el rey don Fernando ordena en una provisioacuten para la isla Espantildeola laquodoy licencia eacute facultad aacute cualquier persona naturales de estos Reynos para libremente se puedan casar con mujeres naturales de esa dicha ysla sin tener que incurrir por ello en pena algunaraquo (Villafantildee 129)

No se debe olvidar tampoco a aquellas mujeres que decidieron pasar a las laquonuevas tierrasraquo solteras Estas mujeres tambieacuten tuvieron un papel importante en el desarrollo de las nuevas colonias Los organismos espantildeoles del momento como los mandatarios indianos y todos los cronistas no dejaron pasar desapercibida la importancia social de estas mujeres en la poliacutetica de poblamiento laquo[E]s cierto que los pueblos de Indias nuevamente poblados no se tienen por fijos o estables ni permanentes hasta tanto que mujeres espantildeolas entren en ellos y los encomenderos y conquistadores se casen por muchas causas y respetos buenos y saludables que para ello hayraquo (Villafantildee 126-27)

Si la intencioacuten era la de una presencia permanente en las tierras americanas la mujer soltera que pasase a ellas siempre seriacutea un motivo maacutes para el colono o conquistador de continuar en el mismo suelo Se podriacutea empezar una familia si asiacute se quisiese sin tener que pensar en volver a la metroacutepoli ya fuese a disfrutar de los bienes adquiridos o a laquobuscarraquo una esposa El problema aparecioacute cuando se produjo un exceso de mujeres solteras lo que de alguna manera alteroacute la estructura social existente ya que no habiacutea muchas opciones para ellas aparte del matrimonio o el convento

En consideracioacuten a que la experiencia habiacutea demostrado que un exce-sivo nuacutemero de mujeres ejerciacutea perniciosa influencia sobre la moral y las costumbres se suplicaba al rey no otorgase a aquellas tantas auto-rizaciones para emigrar al Peruacute La ciudad de la Plata fundada en 1538 emite en 1577 un informe en el que se expone la urgente necesidad de que se funde un convento de monjas pues en el territorio de las Au-diencias de Los Charcas existiacutea un gran nuacutemero de muchachas que no pudieacutendose casar se hallaban en gran peligro de perderse (Konetzke laquoemigracioacutenraquo 149)

138 Solorzano Pereira Juan de Libro Primero de la Recopilacioacuten de las Ceacutedulas Reales Cartas y Provisiones y Or-denanzas Reales Noticia preliminar de Ricardo Levenne Universidad de Buenos Aires Facultad de Derecho Y Ciencias Sociales Pub del Instituto de Historia del Derecho Argentino Coleccioacuten de Textos y Documentos para la Historia del Derecho Argentino t V Buenos Aires Imp de la Universidad de Buenos Aires 1945 (Li-bro I Ley 10 laquoQue los Espantildeoles puedan casar con Indias y al contrario a su voluntadraquo t2 p 138 citado en Villafantildee 129

156 JUAN FRANCISCO MAURA

Entristece ver coacutemo se manejan las cifras de estas mujeres como si de ganado o de bienes suntuarios se tratase Por otra parte existieron irregularidades como la de pobla-doras espantildeolas que vivieron amancebadas con hombres que ya estaban casados en la peniacutensula Normalmente esto ocurriacutea cuando la estancia del conquistador se prolonga-ba maacutes de lo debido en lugares donde habiacutea pocas espantildeolas Muchas veces nacieron hijos de estas uniones que hicieron auacuten maacutes difiacutecil la situacioacuten para las mujeres que esperaban en Espantildea a un marido que ya no teniacutea ningunas intenciones de volver En los juicios de residencia los documentos acostumbran a citar estos casos ya que era parte de su obligacioacuten castigar las irregularidades extramatrimoniales y salvaguardar las buenas costumbres familiares que con tanto intereacutes se deseaba mantener laquoUn ejemplo nos lo da la isla de Cuba donde en 1532 viven con hombres casados Olalla Hernaacuten-dez Santillana Aranda lsquola Cordobesarsquo Catalina de Leoacuten Catalina Saacutenchez Francisca Hernaacutendez Mayor de Azebedo Juana de Valeros y lsquouna mujer que estaba en casa de Ayalarsquoraquo (Borges 416)

Estos casos no fueron aislados y mucho menos en Cuba centro neuraacutelgico de todo el movimiento de ida y vuelta entre la metroacutepoli y el Nuevo Mundo Estas ocho acusa-ciones por lo tanto no tienen porqueacute considerarse extraordinarias y menos en el lugar maacutes cosmopolita de las Indias en esos momentos al que llegaban flotas a cada momen-to Al parecer existieron casos parecidos en el Riacuteo de la Plata Peruacute y Nueva Espantildea (Ratcliffe 347) El margen legal para que estas mujeres viviesen como quisiesen estuvo limitado por una moral que veiacutea uacutenicamente en el matrimonio o el convento una salida laquovaacutelidaraquo para que fueran aceptadas socialmente Los hombres en iguales circunstan-cias fueron juzgados por una laquomoralraquo mucho maacutes permisiva

La mujer y el cuerpo eclesiaacutestico

Pues iquestquieacuten diablos os traiacutedo aquiacute dijo don Quijote siendo hombre de la iglesia iquestQuieacuten sentildeor replicoacute el caiacutedo laquomi desventuraraquo Pues otra mayor os amenaza dijo don Quijote sino me satisfaceacuteis a todo cuanto primero os pregunteacute (Cervantes Don Quijote )

Otro factor a tener en cuenta en un anaacutelisis sobre la presencia de la mujer en el Nuevo Mundo es el que tiene que ver con la institucioacuten maacutes importante de las que llegaron desde Europa la iglesia catoacutelica Sin aacutenimo de criticar a tan compleja institucioacuten res-ponsable de gran parte de los aconteceres en el Nuevo Mundo vale la pena analizar algunas singularidades Muchos de sus miembros fueron grandes ejemplos de valor e inteligencia a la hora de tratar los maacutes variados y escabrosos asuntos con los que se encontraron los cristianos en la otra orilla durante este periacuteodo Se debe resaltar tam-

157ESPANtildeOLAS DE ULTRAMAR EN LA HISTORIA Y EN LA LITERATURA

bieacuten su caraacutecter medieval en la manera de hacer apostolado y de entender y tratar a los potenciales cristianos Si se tienen en cuenta los privilegios y prerrogativas que algunas de las altas jerarquiacuteas eclesiaacutesticas tuvieron no seriacutea superfluo estimar que un respeta-ble porcentaje de la poblacioacuten de origen laquodudosoraquo muy bien podiacutea venir de la misma iglesia Fueron muchas las viacutectimas y muchas las familias divididas por un padre laquoinvi-sibleraquo Gran parte de los hijos o laquosobrinosraquo de estos sacerdotes pasaron a ocupar cargos similares incluyendo los privilegios que estos cargos llevaban consigo como si se trata-se de cualquier otro oficio gremial transmitido generacionalmente regla tan comuacuten en la Europa medieval Todaviacutea a finales del siglo XIII en Espantildea los derechos de los hijos y nietos de los sacerdotes estaban protegidos por la ley sin que hubiesen podido ser erradicados por las reformas gregorianas (Ratcliffe 347)139

Las letras espantildeolas ya se haciacutean eco de estos lances amorosos entre representantes de la Iglesia y ciertas damas del lugar desde los tiempos del poeta riojano Gonzalo de Berceo En su obra maacutes conocida Los milagros de Nuestra Sentildeora Berceo describe con un realismo ingenuo y sencillo relatos de humor y de humanismo sobre aquellos hombres de carne y hueso que eran perdonados por la intercesioacuten de la Virgen Mariacutea Juan Ruiz por su lado haraacute de su Libro de buen amor la obra maacutes representativa en este sentido Seriacutea prolijo recordar la actuacioacuten de la Iglesia durante diversos periacuteodos de la Edad Media no soacutelo en Espantildea sino en toda Europa En la Espantildea musulmana del siglo XII concretamente en Sevilla el comportamiento de los representantes de la iglesia cristia-na (mozaacuterabe) en territorio islaacutemico es duramente criticado por el sevillano Ibn Abdun Este precioso documento muestra el estricto control y falta de confianza que existiacutea sobre la mujer prohibieacutendolas que entrasen en las laquoabominablesraquo iglesias cristianas

porque los cleacuterigos [cristianos] son libertinos fornicadores y sodomi-tas Asimismo debe prohibirse a las mujeres francas que entren en la iglesia maacutes que en diacuteas de funcioacuten o fiesta porque alliacute comen beben y fornican con los cleacuterigos y no hay uno de ellos que no tenga dos o maacutes de estas mujeres con que acostarse Han tomado esta costumbre por haber declarado iliacutecito lo liacutecito y viceversa Convendriacutea pues mandar a los cleacuterigos que se casasen como ocurre en Oriente y que si quie-ren lo hagan (Leacutevi-Provenccedilal 150)

Pese a existir una convivencia paciacutefica durante gran parte de la Edad Media entre los tres credos monoteiacutestas de Espantildea (cristianos musulmanes y judiacuteos) esto no suponiacutea que no existiese desprecio y desconfianza entre estos grupos religiosos Dice Abdun resaltando el peligro que suponiacutea que una mujer entrase en casa de un cleacuterigo cristiano de vida ceacutelibe

No debe tolerarse que haya mujer sea vieja o no en casa de un cleacuterigo mientras eacuteste rehuacutese casarse Obliacutegueseles ademaacutes a circuncidarse co-mo les obligoacute al-Mutadid pues si a lo que dicen siguen el ejemplo de Jesuacutes (iexclDios les bendiga y salve) Jesuacutes se circuncidoacute y precisamente ellos que han abandonado esta praacutectica tienen una fiesta que celebran solemnemente el diacutea de su circuncisioacuten (Leacutevi-Provenccedilal 150-151)

139 Valdriacutea la pena ver si han cambiado mucho las cosas desde hace quinientos antildeos a esta parte o si in-cluso la iglesia moderna ha retrocedido en tolerancia en cuanto a las relaciones sexuales de los representantes de la Iglesia

158 JUAN FRANCISCO MAURA

El historiador argentino Germaacuten Arciniegas recoge un pasaje ilustrativo de lo men-cionado anteriormente pero trasladado al ambiente de la colonia diciendo que incluso en poblaciones pequentildeas como Santa Fe con poco maacutes de un convento y una ermita la fragilidad de la carne enredaba a frailes soldados y virreyes por igual laquoEl buen So-liacutes que murioacute en olor de santidad con la cabeza reclinada sobre un par de ladrillos y en saya de franciscano cruzaba en las noches el solar de su palacio para ir a besar a la Marichuelaraquo (118-19)

Arciniegas recoge tambieacuten un suceso aparecido en el diario de Lima en 1667 que no tuvo que ser extraordinario durante los primeros antildeos de la colonia laquoEl fraile carmelita mdashGrande hereje y siendo sacerdote deciacutea misa gran perro lujurioso deshonesto que relatando sus maldades dijo que en cierta ciudad habiacutea conocido carnalmente a maacutes de trescientas y sesenta mujeres y en un convento de monjas habiacutea cometido muchos sacrilegios Este lo trujeron preso de Buenos Aires por Chileraquo (119)

Las controversias de la iglesia moderna sobre las relaciones que los eclesiaacutesticos de-ben tener con el sexo femenino parece que no han encontrado todaviacutea respuesta Sigue existiendo miedo y recelo a que la mujer comparta no soacutelo poder en la jerarquiacutea de la iglesiacutea sino en la vida privada de los miembros de la institucioacuten En la Nueva Espantildea el primer obispo de Meacutexico Juan de Zumaacuterraga viendo en la mujer un ser de tentacioacuten irresistible prohibioacute terminantemente la presencia de eacutestas en su casa Ni siquiera para su limpieza y aseo El franciscano Juan de Torquemada se refiere a este comportamien-to como una de las virtudes del popular obispo

Fue este benditiacutesimo prelado muy amigo de la virtud y de virtuosos y aceacuterrimo reprehendedor de vicios y viciosos y tan enemigo de la ociosidad que no permitiriacutea que alguno de su casa estuviese ocioso fue amiciacutesimo de la limpieza por lo cual jamaacutes consintioacute que mujer alguna entrase en su casa aunque fuese necesaria al servicio de ella ni nunca consintioacute que por alguna ocasioacuten subiese mujer a lo alto y aposentos de ella antes lo teniacutea todo cerrado como un monasterio porque sabiacutea (como quien tambieacuten sabiacutea) que la ocasioacuten suele derribar los maacutes fuertes y robustos corazones (450 lib 20 cap 31)

No fueron uacutenicamente miembros de la iglesia catoacutelica los que valoraron la lucha con-tra la tentacioacuten siguiendo al pie de la letra el crudeliacutesimo refraacuten laquoentre santa y santo pared de cal y cantoraquo Se tienen algunas noticias de la vida social de los primeros tiem-pos de la colonia En estos documentos se puede observar coacutemo no distaban mucho las oacuterdenes que se dictaban en la metroacutepoli y las que se llevaban a cabo en la Nueva Espantildea La vida social tanto de damas como de algunos miembros de la iglesia de las colonias era maacutes laquorelajadaraquo de lo que las normas permitiacutean Gracias a la informacioacuten ofrecida por Manuel Romero de Terreros disponemos de los nombres de las primeras virreinas

Las esposas de los primeros cinco Virreyes Don Antonio de Mendoza Don Luis de Velasco Don Gastoacuten de Peralta Don Martiacuten Enriacutequez de Almanza y Don Lorenzo Suaacuterez de Mendoza Conde de la Coruntildea fueron respectivamente Dontildea Caterina de Vargas Dontildea Ana de Cas-tilla y Mendoza hija de Don Diego de Castilla Sentildeor de Gor y Caba-

159ESPANtildeOLAS DE ULTRAMAR EN LA HISTORIA Y EN LA LITERATURA

llerizo de Carlos V Dontildea Leonor de Vieo Dontildea Mariacutea Manrique hija del Marqueacutes de Aguilar y Dontildea Catalina de la Cerda hija del segundo Duque de Medinaceli (Romero 2)

Existen noticias concretas de la seacuteptima virreina de la Nueva Espantildea (1586) dontildea Blanca de Velasco marquesa de Villamanrique En ellas destaca lo anteriormente men-cionado sobre la falta de tolerancia existente en aquellos tiempos difiacutecilmente com-prensible si no fuera por fragmentos esporaacutedicos conservados sobre la vida colonial en la Nueva Espantildea En la siguiente Relacioacuten hecha por autores anoacutenimos sobre la visita que hizo Fray Alonso Ponce Comisario General de la Orden Seraacutefica a las provincias de la Nueva Espantildea se mencionan las eneacutergicas medidas que con los miembros de su orden en su opinioacuten de moral laquomuy relajadaraquo tomoacute este religioso Tambieacuten aparecen mencionadas sus relaciones con la Virreina

Captoacutese ademaacutes la enemistad del gobernante y de la Virreina Dontildea Blanca de Velasco hija del cuarto Conde de Nieva sentildeora seguacuten pare-ce de conducta ligera y caraacutecter maacutes que dominante laquoPor este mismo tiempo (septiembre de 1586) fueron el Virey y la Vireyna a holgarse y recrearse en la cibdad de Xochimilco Posoacute con toda su casa dentro de nuestro convento en un dormitorio deacutel y detuacutevose alliacute siete u ocho diacuteas en que los indios les hicieron grandes fiestas aunque les costaron caras porque en una dellas murieron dos o tres dellos con un tiro que se disparoacute y reventoacute y al principal indio de aquella cibdad hirieron muy malraquo (Romero 3-4)

A pesar del riacutegido control eclesiaacutestico y civil que habiacutea en la Nueva Espantildea existieron tambieacuten pareacutentesis en los que incluso miembros de la iglesia y mujeres mdashhumanos al fin y al cabomdash pudieron disfrutar de algunos momentos de regocijo y alegriacutea Con-tinuando con la cita anterior el mismo autor se queja del laquoexcesoraquo de libertad en los frailes que se suponiacutea que teniacutean que profesar una extremada pobreza y no digamos castidad En primer lugar se describen pormenorizadamente la abundancia en el tipo y cantidad de comida de toda clase dulces y vino que se consumieron con largueza y generosidad durante aquellas fiestas Pero lo que maacutes indigna al autor (o autores) fue que llegasen a entrar mujeres en el convento

y aunque todo esto es malo delante de Dios y delante de los hom-bres lo que maacutes mal parecioacute y de que todo el mundo tuvo que mur-murar fueacute la demasiada libertad rotura y disolucioacuten que hubo en en-trar y estar muy de propoacutesito mujeres no soacutelo la Vireyna y las suyas sino otras muchas dentro del dicho convento y andar por las celdas como si fuese cosa profana y como si no hubiera breve apostoacutelico que soacute graves penas y censuras prohibe estas entradas y como si a los frai-les no los comprendiera el dicho breve por admitirlas y no estuviera asiacute declarado y mandado por nuestros estatutos generales de Toledo (Romero 4-5)

La preocupacioacuten por las laquotentaciones de la carneraquo fuera del matrimonio siempre es-tuvo en la mente de los religiosos espantildeoles asiacute como de otras nacionalidades y reli-

160 JUAN FRANCISCO MAURA

giones que intentaban vanamente erradicar algo tan intriacutenseco al ser humano como a cualquier otra especie animal Esta preocupacioacuten se acentuoacute mucho maacutes en el Nuevo Mundo donde muchas sociedades tribales no veiacutean a la mujer como parte integrante de su propiedad privada La razoacuten es obviamente socioloacutegica y ha existido desde el principio de los tiempos en las civilizaciones maacutes primitivas laquoNo desearaacutes a la mujer del proacutejimoraquo El quebrantar este precepto equivaldriacutea a desestabilizar desde su base a la sociedad judeo-cristiana fundamentada en la familia Las penas aplicadas en estas transgresiones seraacuten lo suficientemente severas como para marginar socialmente mdashen el mejor de los casosmdash a aquellos que las pongan en praacutectica Siendo la mujer la encar-gada por la naturaleza de trasmitir la descendencia de la especie su libertad sexual se veraacute limitada por el peligro de quedar embarazada cada vez que ignore tal elemental precepto140

Primeras escritoras del Nuevo Mundo

Contra cuerdos y contra locos estaacute obligado cualquier caballero andante a volver por la honra de las mujeres cualesquiera que sean Cuanto maacutes por las reinas de tan alta guisa y pro como fue la reina Madaacutesima a quien yo tengo particular aficioacuten por sus buenas partes porque fuera de haber sido fermosa ademaacutes fue muy prudente y muy sufrida en sus calamidades que las tuvo muchas (Cervantes Don Quijote)

Fueron varias las escritoras que durante los siglos XVI y XVII tuvieron una relacioacuten di-recta o indirecta con el Nuevo Mundo Muchas de ellas eligieron la vida monaacutestica mdashen algunos casos como refugio huyendo de sus maridosmdash uacutenica salida en una estructura social en donde no eran muchas las opciones especialmente en una eacutepoca donde el fac-tor religioso pesaba casi tanto como el econoacutemico pero sobre todo para dedicarse a una vida espiritual difiacutecilmente alcanzable en otras circunstancias Mariloacute Vigil apunta que las monjas que lo eran por su propia voluntad ademaacutes de tener inquietudes religiosas tambieacuten las teniacutean intelectuales como es el caso de la escritora miacutestica espantildeola Santa Teresa de Jesuacutes (1515-1582) que ademaacutes de tener una de las vidas maacutes interesantes que se conozcan supo sacar tiempo para escribir las maacutes bellas manifestaciones de la poesiacutea liacuterica y sobre todo de la prosa castellana (Vigil 237-38) Cada una de estas mujeres de-dicadas a la vida literaria y espiritual de su tiempo se merece muchiacutesimo maacutes espacio del que se les pueda ofrecer en estas pocas liacuteneas No obstante con estas pasajeras men-

140 Aunque afortunadamente las cosas han cambiado para la mujer no se debe dejar de mencionar la can-tidad de abusos sexuales de la que es viacutectima en la sociedad moderna

161ESPANtildeOLAS DE ULTRAMAR EN LA HISTORIA Y EN LA LITERATURA

ciones se espera al menos incluirlas y poder despertar el suficiente intereacutes para que sus vidas y sus obras no sigan sumergidas en las simas del olvido Para que estas mujeres de la iglesia pudiesen satisfacer su curiosidad cognoscitiva era necesario romper todas aquellas barreras que supusiesen un estorbo o una restriccioacuten a la hora de investigar consultar o hablar con cualquier persona religiosa de cualquier orden o secular ya fue-se obispo o cleacuterigo Las posiciones intelectuales entre las diferentes oacuterdenes religiosas fueron muy dispares como bien es sabido No eran iguales los planteamientos teoloacute-gicos de los dominicos que los de los franciscanos o los de los carmelitas que los de los agustinos o jesuitas Era necesario por lo tanto tener acceso a estas fuentes de informa-cioacuten para poder constrastar las diferencias y hacer valoraciones propias (Vigil 237-38) El escritor espantildeol Caro Baroja destaca el caraacutecter enciclopeacutedico del catolicismo donde se han integrado corrientes y posturas muy dispares que a traveacutes del diaacutelogo daban cierto espacio al creyente con maacutes curiosidad intelectual para que este pudiese compa-rar y valorar las diferentes opciones que se le ofreciacutean (Vigil 237-38)

Varias de estas mujeres intelectuales fueron hijas de conquistadores que aunque na-cidas en suelo americano seguiacutean expresaacutendose en la lengua de sus padres con no me-nos fuerza que sus contemporaacuteneas peninsulares Es cierto que existieron numerosas escritoras en el Nuevo Mundo durante el siglo XVIII algunas dedicadas incluso al estudio de las matemaacuteticas como la mexicana Dontildea Francisca Gonzaga y Castillo Pero para limitar el presente trabajo a los siglos XVI y XVII uacutenicamente se incluiraacuten ejemplos de estos dos siglos

La peruana Josefa de Alarcoacuten publicoacute en 1648 unas liras dedicadas a las Exequias del Priacutencipe Baltasar Carlos

Cifro en capilla breveEl tribunal de la Magestad maacutes graveEn fe de lo que debeA Carlos que en dos mundos no cabe141

El caso de Sor Jeroacutenima de la Asuncioacuten es muy interesante una mujer que tuvo la oportunidad de viajar a Meacutexico y posteriormente a las Filipinas para cumplir con las mi-siones que le habiacutean sido encomendadas por su orden Nacida en Toledo en 1555 en el seno de una noble y acaudalada familia estuvo destinada a recorrer el mundo ofrecien-do sus servicios a todos los necesitados distinguieacutendose por su ardiente caridad laquovien-do que los galeotes eran tratados con dureza excesiva sobre todo cuando los llevaban de un pueblo a otro procuroacute aliviar las penas de aquellos desgraciados y lo consiguioacute en parteraquo (Serrano y Sanz 268 65) Hija del licenciado e ilustre jurista Pedro Garciacutea Yaacute-ntildeez y de dontildea Catalina de la Fuente ingresoacute contra su voluntad en el monasterio de las Clarisas de Santa Isabel de los Reyes (Toledo) el 5 de agosto de 1570 (Trevintildeo 46) hay que decir que eacutesta no seraacute la uacutenica voluntad contra la que tuvo que luchar

Sor Jeroacutenima se embarcoacute para Meacutexico y de alliacute partioacute hacia Manila junto con siete compantildeeras en el famoso laquoGaleoacuten de Manilaraquo que saliacutea anualmente del puerto mexi-cano de Acapulco Su viaje a las Filipinas duroacute un antildeo y tres meses desde su salida de Espantildea tiempo en el que demostroacute un gran valor y determinacioacuten por el soacutelo hecho de

141 Manuel Serrano y Sanz Apuntes para una biblioteca de escritoras espantildeolas desde el antildeo 1401 al 1833 vols 268 269 270 271 Biblioteca de Autores Espantildeoles (Madrid Atlas 1975) 268 19

162 JUAN FRANCISCO MAURA

embarcarse en tan precarias naves Fue la primera misionera de Oceaniacutea muriendo en Manila en 1621 Alliacute fundoacute el monasterio de Santa Clara que perviviriacutea hasta ser bom-bardeado en la Segunda Guerra Mundial (Trevintildeo 47) Escribioacute su Vida donde trata de la fundacioacuten del convento y de todas las tribulaciones mdashllegoacute a ser excomulgadamdash y satisfacciones que una vida dedicada a una causa justa proporciona Tambieacuten escribioacute una obra de caraacutecter filosoacutefico-teoloacutegico titulada Carta de marear en el mar del mundo nombre alegoacuterico que da cuenta de la enorme distancia recorrida a traveacutes del laquomar del espiacuterituraquo por sor Jeroacutenima He aquiacute algunos de sus versos de caraacutecter religioso

Vuestra soy para vos naciacuteiquestQueacute mandaacuteis hacer de miacute Inaccesible grandezaEterna Sabiduriacuteay bondad del alma miacuteaDios un ser poder y Altezamirad la suma pobrezade eacutesta que se ofrece aquiacuteiquestQueacute mandaacuteis hacer de miacute (Serrano y Sanz 268 66)

Ya en Meacutexico tenemos otro ejemplo de una mujer dedicada por completo a Dios y al estudio y composicioacuten de obras de caraacutecter teoloacutegico Dontildea Ana Mariacutea del Costa-do de Cristo nacida en la ciudad de Tlaxcala hacia el antildeo 1650 Tomoacute la orden de San Francisco para consagrarse a las labores de su orden y a la escritura Se dice que con los escritos de Dontildea Ana Mariacutea se podriacutean formar veinte tomos (Serrano y Sanz 268 282) Estas son algunas de sus obras Vida y muerte de Jesucristo Nuestro Sentildeor Vida del Seraacutefico Padre San Francisco de Asiacutes Vida de la iacutenclita Virgen Santa Clara Vida del sutiliacutesimo doctor Juan Duns Escoto

Pero no todas las monjas tuvieron vidas tan dedicadas al estudio y la oracioacuten Loacutegica-mente entre un nuacutemero tan grande de mujeres existioacute de todo y seriacutea un error pensar que todos los conventos femeninos estaban integrados por laquocaacutendidas palomasraquo Una monja en el siglo XVI y XVII teniacutea mucha maacutes fuerza que una mujer ordinaria ya que actuaban en grupo y la entrada a los recintos donde viviacutean estaba permitida solo a mu-jeres Esta situacioacuten las haciacutea mucho maacutes fuertes a todos los niveles que una mujer sola protegida uacutenicamente por su familia laquoLas monjas durante los siglos XVI y XVII lucharon por eludir la clausura y por zafarse del control que los frailes de las secciones masculi-nas de sus congregaciones ejerciacutean sobre ellasraquo (Vigil 230) Soacutelo un antildeo maacutes tarde que dontildea Ana Mariacutea del Costado de Cristo en 1651 y a 12 leguas de Meacutexico nacioacute la sin par Sor Juana Ineacutes de la Cruz hija de don Pedro Manuel de Asbaje natural de Vergara (Vizcaya) y de Dontildea Isabel Ramiacuterez de Santillana hija de espantildeoles (Serrano y Sanz 268 289) Por ser sin lugar a dudas la poeta maacutes importante de su tiempo y probable-mente la maacutes conocida del mundo hispano no profundizaremos en ella Su obra es un canto a la inteligencia y el exponente maacutes destacado de la literatura barroca americana tanto en prosa como en verso Destacareacute simplemente que Sor Juana Ineacutes pese a vivir en un sociedad donde no eran excesivas las libertades concedidas a las mujeres tuvo el caraacutecter y la determinacioacuten de dejarnos las maacutes bellas poesiacuteas amorosas que si bien estuvieron enmarcadas en un ambiente religioso como era de esperar por su condicioacuten

163ESPANtildeOLAS DE ULTRAMAR EN LA HISTORIA Y EN LA LITERATURA

pudieron transcender como unas de las maacutes bellas manifestaciones literarias que hoy en diacutea se conservan Fue su agudeza mental sensibilidad y cultura tal que no fueron suficientes los soacutelidos muros del convento para contener el genio de tan extraordinaria mujer Recordemos sus conocidiacutesimos versos en defensa de las mujeres

Hombres necios que acusaacuteisa la mujer sin razoacutensin ver que sois la ocasioacutende lo mismo que culpaacuteis142

Las metaacuteforas y la delicadeza que emplea en rebatir a su obispo en su laquoRespuesta a sor Filotea de la Cruzraquo no son solamente el epiacutetome del feminismo de su tiempo sino una de las maacutes brillantes manifestaciones del barroco hispano Poesiacutea teatro ensayo y un conocimiento extraordinario de las ciencias claacutesicas de su tiempo hacen de esta mujer un ejemplo extraordinario de las letras universales Ya son cientos los artiacuteculos y libros que se han escrito sobre Sor Juana y no dejan de aparecer tesis doctorales sobre los maacutes diversos temas conectados con la citada autora143 Como nos dice Stephanie Merrim en su documentada obra Early Modern Womenrsquos Writing and Sor Juana Ineacutes de la Cruz

She wrote and published on secular themes as atypical for a nun as human love Her remarkably extensive writings essayed and reenacted most of the (male) poetic dramatic theological and even philosophi-cal discourses of her times in the metropolis making her works a com-pendium of baroque culture in its diversity and syncretism Sor Juana self-creation as a learned women effectively toppled many of the walls in which she was materially enclosed and positioned her within the dynamic world of early modern European culture (xii)

No se debe dejar de mencionar a otras escritoras novohispanas de la eacutepoca que aun-que no fueron tan proliacuteficas y relevantes como Juana Ineacutes de la Cruz dejaron testimo-nio de algunos acontecimientos que tienen intereacutes socioloacutegico o testimonial Este es el caso de Dontildea Mariacutea Estrada Medinilla de igual nombre y apellido que la mujer que acompantildeoacute a las tropas de Corteacutes en su primera entrada a Meacutexico Natural de Meacutexico publicoacute toda su obra a mediados del siglo XVII concentraacutendose principalmente en la lle-gada del Marqueacutes de Villena virrey y capitaacuten general de la Nueva Espantildea a la ciudad de Meacutexico en el antildeo 1640 Escrita en octavas reales la obra trata de las fiestas de toros y cantildeas con que se obsequioacute al citado virrey Fue impresa en Meacutexico en 1641 (Serrano y Sanz 269 402)

Mucho maacutes importante para el presente libro es Dontildea Isabel de Guevara que escribioacute en 1556 la carta en que se expone la ayuda que ofrecieron las mujeres en el descubri-miento y conquista del Riacuteo de la Plata No cabe la menor duda de que esta carta es uno

142 Para una mejor comprensioacuten del caraacutecter de esta excepcional mujer veacutease entre los numeros trabajos publicados Fredo Arias de la Canal Intento de psicoanaacutelisis de Juana Ineacutes y otros ensayos sorjuanistas (Meacutexico Frente de Afirmacioacuten Hispanista 1972) 47

143 Veacuteanse entre otros trabajos Octavio Paz Sor Juana Ineacutes de la Cruz o las trampas de la fe Georgina Sabat de Rivers En busca de Sor Juana Margo Glantz Sor Juana la comparacioacuten y la hipeacuterbole Gerard C Flynn Sor Juana Ineacutes de la Cruz Stephanie Merrim Feminist perspectives on Sor Juana Ineacutes de la Cruz Pamela Kirk Sor Juana Ineacutes de la Cruz religion art and feminism

164 JUAN FRANCISCO MAURA

de los documentos maacutes importantes con que contamos en relacioacuten a la aportacioacuten fe-menina en el proceso de la conquista de Ameacuterica Su importancia viene dada por varios factores Primero es uno de los primeros testimonios mdashsi no el primeromdash en donde se expone abiertamente la indispensable colaboracioacuten de las mujeres en el descubrimien-to y conquista de tierras en el Nuevo Mundo laquoQue si no fuera por ellas todos fueran acabadosraquo En segundo lugar la informacioacuten vertida en estas liacuteneas presenta en parte la manera de pensar de una mujer espantildeola en tales circunstancias Extraordinario tes-timonio de primera mano que nos da una idea de lo que significoacute en muchos casos el valor y entrega constantes de muchas de estas mujeres que auacuten a riesgo de perder sus vidas no dudaron en luchar al lado de los hombres por una causa que consideraban laquocomuacutenraquo

La relevancia histoacuterica de dicha carta hace que merezca ser transcrita en su totali-dad

Carta de dontildea Isabel de Guevara a la princesa gobernadora dontildea Juana exponiendo los trabajos hechos en el descubrimiento y conquista del Riacuteo de la Plata por las mujeres para ayudar a los hombres y pidiendo repartimiento

para su marido Asuncioacuten 2 de julio de 1556

Muy alta y muy poderosa sentildeora

A esta provincia del Riacuteo de la Plata con el primer gobernador de ella don Pedro de Mendoza hemos venido ciertas mujeres entre las cuales ha querido mi ventura que fuese yo la una y como la armada llegase al puerto de Buenos Aires con mil quinientos hombres y les faltase el bastimento fue tamantildea el hambre que a cabo de tres meses murie-ran los mil esta hambre fue tamantildea que ni la de Jerusalem se le puede igualar ni con otra ninguna se puede comparar Vinieron los hombres en tanta flaqueza que todos los trabajos cargaban de las pobres mu-jeres asiacute en lavarles las ropas como en curarles hacerles de comer lo poco que teniacutean limpiarlos hacer centinela rondar los fuegos armar las ballestas cuando algunas veces los indios les veniacutean a dar guerra hasta cometer a poner fuego en los versos y a levantar los soldados los que estaban para ello dar arma por el campo a voces sargentean-do y poniendo en orden los soldados porque en este tiempo como las mujeres nos sustentamos con poca comida no habiacuteamos caiacutedo en tanta flaqueza como los hombres Bien creeraacute V A que fue tanta la so-licitud que tuvieron que si no fuera por ellas todos fueran acabados y si no fuera por la honra de los hombres muchas maacutes cosas escribiera con verdad y los diera a ellos por testigos Esta relacioacuten bien creo que la escribiraacuten a V A maacutes largamente y por eso cesareacute Pasada esta tan peligrosa turbunada determinaron subir el riacuteo arriba asiacute flacos como estaban y en entrada de invierno en dos bergantines los pocos que quedaron vivos y las fatigadas mujeres los curaban y los miraban y les guisaban la comida trayendo la lentildea a cuestas fuera del naviacuteo y animaacutendolos con palabras varoniles que no se dejasen morir que presto dariacutean en tierra de comida metieacutendolos a cuestas en los

165ESPANtildeOLAS DE ULTRAMAR EN LA HISTORIA Y EN LA LITERATURA

bergantines con tanto amor como si fueran sus propios hijos Y como llegamos a una generacioacuten de indios que se llaman tinbues sentildeores de mucho pescado de nuevo los serviacuteamos en buscarles diversos modos de guisados porque no les diese en rostro el pescado a causa de que lo comiacutean sin pan y estaban muy flacos Despueacutes determinaron subir el Paranaacute arriba en demanda de bastimento en el cual viaje pasaron tanto trabajo las desdichadas mujeres milagrosamente quiso Dios que viviesen por ver que en ellas estaba la vida de ellos porque todos los servicios del naviacuteo los tomaban ellas tan a pechos que se teniacutea por afrentada la que menos haciacutea que otra sirviendo de marear la vela y gobernar el naviacuteo y sondar de proa y tomar el remo al soldado que no podiacutea bogar y escotar144 el naviacuteo y poniendo por delante a los soldados que no se desanimasen que para los hombres eran los trabajos verdad es que a estas cosas ellas no eran apremiadas ni las haciacutean de obliga-cioacuten ni las obligaba si solamente la caridad Asiacute llegaron a esta ciudad de la Asuncioacuten que aunque ahora estaacute muy feacutertil de bastimentos en-tonces estaba de ellos muy necesitada que fue necesario que las muje-res volviesen de nuevo a sus trabajos haciendo rosas con sus propias manos rosando y carpiendo y sembrando y recogiendo el bastimento sin ayuda de nadie hasta tanto que los soldados guarecieron de sus fla-quezas y comenzaron a sentildeorear la tierra y adquirir indios e indias de su servicio hasta ponerse en el estado en que ahora estaacute la tierra He querido escribir y traer a la memoria de V A para hacerle saber la ingratitud que conmigo se ha usado en esta tierra porque al presente se repartioacute por la mayor parte de los que hay en ella asiacute de los anti-guos como de los modernos sin que de miacute y de mis trabajos se tuviese ninguna memoria y me dejaron de fuera sin me dar indio ni ninguacuten geacutenero de servicio Mucho me quisiera hallar libre para me ir a presen-tar delante de VA con los servicios que a SM he hecho y los agravios que ahora se me hacen mas no estaacute en mi mano porque estoy casada con un caballero de Sevilla que se llama Pedro de Esquivel que por servir a SM ha sido causa que mis trabajos quedasen tan olvidados y se me renovasen de nuevo porque tres veces le saqueacute el cuchillo de la garganta como allaacute VA sabraacute A que suplico mande me sea dado mi repartimiento perpetuo y en gratificacioacuten de mis servicios [en el origi-nal del AHN Diversos doc 141 dice ademaacutes mande que sea proveydo mi marido de alguacuten cargo conforme a la calidad de su persona pues el de su parte por sus servicios lo merece] lo merece Nuestro sentildeor acre-ciente su Real vida y estado por muy largos antildeos De esta ciudad de la Asuncioacuten y de julio 2 1556 antildeosServidora de V A que sus Reales manos besa

Dontildea Isabel Guevara

144 Sacar agua de un riacuteo acequia o presa

166 JUAN FRANCISCO MAURA

Sobremdash A la muy alta y muy poderosa sentildeora Princesa dontildea Joana Gobernadora de los reinos de Espantildea etc ndash En su Consejo de Indias (Isabel de Guevara 619-21)

Iroacutenicamente la carta teniacutea que llegar a manos de la desdichada heredera del trono de Castilla e hija de los Reyes Catoacutelicos Juana laquola Locaraquo que habiacutea muerto el antildeo an-terior Son profeacuteticas las palabras de esta mujer no soacutelo porque sus hechos personales quedasen en el olvido sino porque incluso se ha borrado la historia de las mujeres en el Nuevo Mundo negando su presencia Por lo menos Isabel Guevara tuvo acceso a una pluma iquestCuaacutentas seriacutean las que ni siquiera sabriacutean escribir

Otra contemporaacutenea fue dontildea Leonor de Iciz que vivioacute durante la segunda mitad del siglo XVI Interesa sobre todo por los sonetos que escribioacute en elogio de Ercilla soldado que participoacute en la conquista de Chile y que se inmortalizoacute con su obra La Araucana (Serrano y Sanz 269 534) Lo mismo hizo Dontildea Bernarda Lintildeaacuten en 1610 autora de otro soneto en memoria del capitaacuten Gaspar Peacuterez de Villagraacute que participoacute en la conquista de Nuevo Meacutexico (Serrano y Sanz 270 14) Los escritos de estas mujeres tratan de de dos de las eacutepicas maacutes dramaacuteticas de la conquista

En el Peruacute y en pleno siglo XVII aparece otra fundadora de conventos Sor Bernardina de Jesuacutes que ademaacutes fue comparada con Santa Teresa por la semejanza de sus laquocartasraquo con las de la santa de Avila Fue fundadora del convento de Tacunga en Quito maacutes tarde destruiacutedo por un terremoto Dice Serrano y Sanz con respecto a su biografiacutea un tanto legendaria que fue carmelita descalza de Lima y hermana de Dontildea Mariacutea Benavides y Esquivel abuela de D Pedro de Peralta Barnuevo (Serrano y Sanz 269 553) Dicen que esta santa se alimentoacute durante treinta antildeos con laquochochos y caacutescaras de naranja hecho tan raro como increiacuteble Cuando fallecioacute reparaban las monjas en ponerle una vara de azucenas porque habiacutea sido casada y aquellas flores aparecieron milagrosamente sobre el cadaacuteverraquo (Serrano y Sanz 269 553)

Otra limentildea del primer cuarto del siglo XVII con reputacioacuten de santa fue Dontildea Luisa Melgarejo En este caso no se trata de una religiosa de oficio sino de la mujer del doctor Juan de Soto La uacutenica diferencia es que dontildea Luisa al parecer teniacutea laquovisiones y reve-lacionesraquo lo que debioacute poner nervioso a maacutes de un miembro del tribunal del laquoSanto Oficioraquo que consideraron sus escritos laquoculpadosraquo De su papel de laquosantaraquo pasa por lo tanto al de laquoposesaraquo o laquoendemoniadaraquo El inquisidor de Lima Gaitaacuten escribioacute un infor-me donde a traveacutes de la opinioacuten puacuteblica y de otras averiguaciones se deciacutea que dontildea Luisa Melgarejo laquomujer santaraquo sabiacutea cuando las almas de los difuntos saliacutean del Purga-torio El diacutea 14 de noviembre de 1623 se decidioacute tomar posesioacuten de todos los cuadernos en los que habiacutea escrito las experiencias de todos sus laquoarrobos suspensiones extasis y revelacionesraquo Estos cuadernos una vez recogidos presentaron toda una serie de al-teraciones borrones adiciones enmiendas incluso diferente letra por lo que despueacutes de haber sido examinados resultaron culpables145 Excelente imaginacioacuten debioacute tener dontildea Luisa Melgarejo la suficiente al parecer para convencer a algunos miembros de la iglesia de que en sus escritos laquohabiacutea algoraquo que mereciacutea la pena Estas cosas ocurriacutean en Lima uno de los centros culturales maacutes importantes de la vida social y poliacutetica en la Ameacuterica espantildeola Lima a comienzos del siglo XVII seguacuten el empadronamiento llevado

145 Serrano y Sanz 270 47 Veacutease J T Medina Historia del tribunal del Santo Oficio de la Inquisicioacuten de Lima (1569-1820) (Santiago Imprenta Gutemberg 1887) Tomo II 34-41

167ESPANtildeOLAS DE ULTRAMAR EN LA HISTORIA Y EN LA LITERATURA

a cabo en 1614 por el marqueacutes de Montesclaros era una ciudad de 25000 habitantes de los que 11000 eran espantildeoles El nuacutemero de religiosos y religiosas llegaba a 1720 (Pittaluga 77)

Se sabe que en la Isla de Santo Domingo durante el siglo XVI nacioacute o al menos resi-dioacute una poeta de ceacutelebre apellido en los aconteceres del Nuevo Mundo Dontildea Elvira de Mendoza de la que se conserva un manuscrito en la Real Academia de la Historia laquoCantares miacuteos que estaacuteis rebeladosraquo Eugenio de Salazar hace un elogio de ella como poeta en un Soneto a la ilustre Poeta y Sentildeora Dontildea Elvira de Mendoza moradora en la ciudad de Santo Domingo (Serrano y Sanz 270 53)

Nacida en Burgos sobre el antildeo 1590 dontildea Luisa de Padilla merece un lugar aparte dentro del grupo de mujeres escritoras de su eacutepoca Por su estilo faacutecil y castizo su no-vedad de pensamientos y su rica erudicioacuten recibioacute el siguiente comentario de Manuel Serrano y Sanz laquoPocas figuras hay en nuestra historia literaria femenil que puedan compararse a esta eminente prosista acaso la maacutes notable de cuantas florecieron en Es-pantildea durante el siglo XVIIraquo (Serrano y Sanz 270 95-96) Este comentario y comparacioacuten deberiacutea ampliarse para que tambieacuten incluyese a laquola historia literaria varonilraquo

Dontildea Luisa fue defensora de la labor que la Inquisicioacuten estaba realizando en la laquolim-piezaraquo de mujeres laquosoldados del demonioraquo que existieron en algunas provincias espa-ntildeolas en aquel tiempo Muchas de las mujeres que combinaban la magia con los po-deres curativos fueron condenadas no solamente por hombres de la Inquisicioacuten sino tambieacuten por mujeres de todas las clases sociales como es el caso de Luisa de Padilla condesa de Aranda En su obra Elogios de la verdad e invectiva contra la mentira preveniacutea contra aquellos que practicaban artes en contra de la religioacuten cristiana La magiacutea negra seguacuten Padilla era la causante de que muriesen casi tantas personas como otras causas naturales habieacutendose descubierto hasta seis mil brujas en Vizcaya y Guipuzcua con-fesando una mujer de un pueblo pequentildeo haber matado con su laquomagiaraquo a ochocientas personas (Perry 31) Eran estos laquomales de ojoraquo y maldiciones seguacuten la autora las causas de que se secasen los pechos de las madres lactantes que se separasen las parejas casa-das y que abortasen las embarazadas (Perry 31)

Si se tiene en cuenta que dontildea Luisa estuvo emparentada con la maacutes rancia aristocra-cia de su tiempo o lo que es lo mismo con algunos de aquellos que en cierta manera dirigiacutean los destinos de Espantildea en aquella eacutepoca (Duques de Lerma Duque de Uceda Marqueacutes de Cueacutellar Conde de Santa Gadea Marqueacutes de Belmonte por citar algunos) se comprenderaacute mejor su identificacioacuten con una institucioacuten que en teoriacutea velaba por la salvaguarda de los valores laquoeternosraquo de una Espantildea destinada a ser la campeona del ca-tolicismo durante los siglos XVI y XVII El padre de dontildea Luisa fue don Martiacuten de Padilla y Manrique extraordinario militar que proboacute su valor contra enemigos moriscos ingle-ses holandeses piratas berberiscos y el renegado genoveacutes Muley Faxad Fue veterano de la batalla de Lepanto donde apresoacute a cuatro galeras y acompantildeoacute con su escuadra a la reina Dontildea Margarita de Austria cuando vino de Geacutenova en 1598 laquoHabiacutea obtenido a 24 de julio de 1587 el tiacutetulo de Conde de Santa Gadea y en 1596 el de Capitaacuten General de la Armada del mar Oceacuteanoraquo (Serrano y Sanz 27095-96)

Por otra parte tambieacuten se sabe que dontildea Luisa participoacute directamente y desde tem-prana edad en la praacutectica de algunas actividades intelectuales como la historia y la arqueologiacutea a la vez que dedicaba su tiempo a virtudes cristianas como la caridad y el socorro de los necesitados (Serrano y Sanz 270 97) Resulta mucho maacutes faacutecil compren-

168 JUAN FRANCISCO MAURA

der la postura ideoloacutegica de esta gran mujer si tienen en cuenta ademaacutes de los factores antes mencionados otros tantos de caraacutecter biograacutefico concernientes a su educacioacuten y matrimonio

Otra escritora fue la mexicana dontildea Mariacutea Casilda Pozo natural de Temestla (Meacutexi-co) Nacida en el mes de abril de 1682 dejoacute escrita su biografiacutea en 16 cuadernos el ma-nuscrito original se encuentra en la biblioteca del colegio de San Gregorio de Meacutexico Fue su confesor el jesuiacuteta Domingo Quiroga que fue quieacuten la incitoacute a escribir su obra (Serrano y Sanz 270 137) Sor Juana de San Antonio aparece a principios del siglo XVII formando parte de un grupo de religiosas espantildeolas que fueron a Manila por la ruta de Meacutexico Ademaacutes de distinguirse por sus cualidades personales su obra interesa por ofrecer informacioacuten testimonial y costumbrista acerca de la forma de vestir de chinos y japoneses (Serrano y Sanz 270 225)

Otra monja esta vez ecuatoriana fue Gertrudis de San Ildefonso Nacida en 1652 profesoacute su vocacioacuten en el convento de Santa Cruz de Quito dejando escrita su vida por mandato de su confesor el padre Martiacuten de la Cruz el cual hizo una biografiacutea laquoen tres gruesos voluacutemenesraquo Gertrudis de San Ildefonso murioacute en 1709 (Serrano y Sanz 270 300) en olor de santidad

Sor Mariacutea Ana Agueda de San Ignacio nacioacute el 3 de marzo de 1695 en la dioacutecesis de la puebla de los Angeles en un rancho del lugar de Santiago Tecaliacute (Serrano y Sanz 270300) Esta monja mexicana escribioacute varias obras durante su vida conventual a lo largo de la cual desempentildeoacute el cargo de priora por muchos antildeos Entre sus obras todas de caraacutecter piacuteo y de laquoamor divinoraquo escribioacute un curioso y laquocopiosoraquo tratado de la Leche virginal de la Soberana Madre de Dios El padre Fr Juan de Villa Saacutenchez hace el siguiente comentario al respecto laquoen que hablando primero en sentido natural de los beneficios que debemos a Nuestra Sentildeora pasa a tratar en sentido miacutestico y alegoacuterico enten-diendo en la leche la doctrinaraquo (Serrano y Sanz 270301) Mexicana fue tambieacuten Sor Petronila de San Joseacute que ejercioacute como abadesa del Real monasterio de Jesuacutes Mariacutea de la ciudad de Meacutexico Escribioacute Vidas de varias religiosas ejemplares obra que tiene su im-portancia ya que al parecer laquoDe esta obra se sirvioacute D Carlos de Siguumlenza y Goacutengora para escribir su Parayso Occidental (Meacutexico 1684) seguacuten eacutel mismo declara en el proacutelogo diciendo lsquoa quien si hay algo bueno en esta historia se le debe todorsquoraquo (Serrano y Sanz 270 354) Menos conocida fue su compatriota Sor Luisa de Santa Catalina natural de Xacona laquopueblo situado en las inmediaciones de Zamora (Meacutexico)raquo siendo bautizada en 1682 Escribioacute Cartas espirituales a su confesor el P Juan Loacutepez de Aguado (Serrano y Sanz 270 361-62)146

Todos estos escritos la mayoriacutea de ellos ignorados por el gran puacuteblico tienen la im-portancia de darnos una perspectiva diferente En otras palabras ensentildearnos la maacutes refinada sensibilidad de muchas mujeres que permanecieron y en su mayoriacutea siguen permaneciendo a laquooscurasraquo de una eacutepoca tan rica de la literatura espantildeola como fue el Siglo de Oro Este siglo fue tambieacuten en su dimensioacuten literaria y artiacutestica patrimonio de la mujer

146 Para profundizar en muchas de estas escritoras hispano-americanas la consulta de la Biblioteca Hispano-Americana de Beristain de Souza resulta de capital importancia

169ESPANtildeOLAS DE ULTRAMAR EN LA HISTORIA Y EN LA LITERATURA

Sor Nada ardores divinos de una monja adolescente escritos ineacutedi-tos de una recieacuten profesa del siglo XVI147

iexclQueacute encantadores son tus amores hermana miacutea espo-sa iexclQueacute deliciosos son tus amores maacutes que el vino Y el aroma de tus perfumes es mejor que el de los baacutelsamos Miel virgen destilan tus labios esposa miel y leche hay en tu lengua y el perfume de tus vestidos es como aroma de incienso (Cantar de los Cantares 4 10-11)

Sor Nada llamada asiacute por humildad seguacuten dice el Indice de manuscritos de la Biblio-teca Nacional de Madrid es uno de los ejemplos maacutes desconocidos e interesantes que tenemos de la poesiacutea y prosa amoroso-religiosa del siglo XVII Hasta la fecha nunca se habiacutea publicado su obra e incluso hasta el antildeo 1995 para mi sorpresa no habiacutea copias microfilmadas de sus manuscritos en la Biblioteca Nacional Serrano y Sanz en su libro Apuntes para una Biblioteca de Escritoras Espantildeolas hace una escueta y pasajera mencioacuten de esta mujer y de su obra (68-69) siendo eso todo lo que hasta ahora se sabiacutea de ella Sus escritos consisten en los siguientes manuscritos

1 laquoEn queacute consiste un verdadero amor de Diosraquo 9 hojas uacutetiles en 4ordm letra del siglo XVII Biblioteca Nacional de Espantildea Manuscrito 1295926

2 laquoPintura del Propio Amorraquo laquoPintura del propio Amorraquo 10 hojas uacutetiles en 4ordm letra del siglo XVII Biblioteca Nacional de Espantildea Manuscrito 1295927

3 laquoEsplicacioacuten sobre en queacute consiste la paz del Almaraquo laquoQuartillas aacute un Alma que padece soledad interiorraquo 7 hojas uacutetiles en 4ordm letra del siglo XVII Biblioteca Nacio-nal de Espantildea Manuscrito 1295828

En cuanto a su persona soacutelo se nos dice que laquose encubrioacute con este seudoacutenimo laquoSor Nadaraquo Esta monja desconocida de origen hispanoamericano posee toda la frescura e ingenuidad de una joven apasionada metida por vocacioacuten u obligacioacuten a ejercer la profesioacuten maacutes comuacuten para mujeres de cierta clase social de su tiempo En sus liacuteneas podemos encontrar un misticismo simple incluso en algunos momentos infantil pero a su vez lleno de una fuerza y sensualidad interior poco comuacuten en escritos de este geacute-nero que desborda los liacutemites del laquoamor divinoraquo a traveacutes de los diaacutelogos entre el Alma y el Esposo Sor Nada consigue proyectar su amor a Dios maacutes allaacute de una experiencia romaacutentica Su experiencia es sincera y genuinamente miacutestica trascendiendo la imita-cioacuten o la propia creacioacuten poeacutetica ficcionalizada (Hatzfeld 30) Algunos pasajes son de un

147 Veacutease mi artiacuteculo Sor Nada ardores divinos de una monja adolescente escritos ineacuteditos de una monja profesa del siglo XVIIraquo Espeacuteculo Revista de estudios literarios 26 (2004) 1-10 Universidad Complutense de Madrid http wwwucmesinfoespeculonumero26sornadahtml

170 JUAN FRANCISCO MAURA

alto contenido eroacutetico con sustantivos y metaacuteforas que recuerdan la maacutes iacutentima unioacuten amorosa en unos casos y el tierno amor maternal en otros

[T]e miro Jesus mio desnudo a las inclemencias del tiempo y ardien-do en puro fuego de Amor por la salud de las Almas y me ensentildeas a que te ame con todo mi corason y puresa de espiritu No atendiendo ni buscando umanos intereses ni a solisitar consuelos ni regalos espi-rituales que suelen empantildear la puresa del noble corason No mi Jesus amable pues antes me ensentildeaste tu puro Amor que desnudo sean [sic] de encaminar mis passos desde el pesebre asta la cuna en donde te miro tan desnudo como el pesebre y todo Sentildeor por mi Amor (Mss 12959 26 hoja 1 v)

El manuscrito (12959 27) de la mencionada serie de tres contiene algunas correccio-nes quizaacute hechas por el confesor o quizaacute por ella misma cuando se dirige con excesiva familiaridad y arrebatado fervor a su Amado148 He escogido el manuscrito (12959 Caja 28) en primer lugar por ser el ejemplo maacutes representativo de su poesiacutea y prosa En este manuscrito encontramos de forma maacutes directa que alegoacuterica toda la frescura de un diaacutelogo entre Jesuacutes y el alma que raya como diriacutea Cervantes laquoa la llana y sin rodeosraquo (667 lib 2 cap 38) con el doloroso y a veces desesperado deseo de la entrega y la unioacuten final con el Amado La ortografiacutea no ha sido corregida respetaacutendose el texto ori-ginal149 Veamos el siguiente fragmento

Mira que te amo con Amor de padre y con Amor de esposo el mas fino y puro enamorado que no tan solo me presio de darte mi mano sino tambien todo mi cuerpo y sangre para que con mi pan de vida te sustentes y te regales a tus anchuras y que con mi propio espiritu vivas en paz como tu lo deseas y que mis amores sean unico alivio en tus trabajos en esta mortal vida pues si esto es asi y sabes que muero por darte vida dime esposa mia de que te fatigas Dame querida tus bras-sos y dime si me amas como yo te amo (Hoja 4)

148 La antologiacutea de Promis ha procurado insertar entre los textos antoloacutegicos algunos que se refieren a la es-critura de mujeres fundamentalmente de aquellos generados en el interior de los espacios conventuales Estos textos se fundan como laquohistorias de vidasraquo y responden casi siempre a los requerimientos de los confesores de las monjas coloniales En este sentido resulta valiosiacutesima la incorporacioacuten de la llamada Relacioacuten autobiograacute-fica de Sor Ursula Suaacuterez como una muestra significativa de la escritura monjil entendida en esta eacutepoca (como tambieacuten en la tradicioacuten europea medieval) inserta en las denominadas laquolabores de manoraquo de las religiosas ya que el texto escrito por mandato se convertiacutea en una suerte de entramado o tejido linguumliacutestico es decir en un nuevo bordado que la mayor parte de las veces el confesor convertido en censor iba haciendo tachando y enmendando En la antologiacutea Promis agrega un texto de Sor Tadea Garciacutea de la Huerta titulado Relacioacuten de la inundacioacuten que hizo el riacuteo Mapocho de la ciudad de Santiago de Chile en el monasterio de Carmelitas titular de San Rafael el diacutea 16 de junio de 1783 se trata de un poema tipo romance escrito en versos octosilaacutebicos y que da cuenta de lo sucedido ese diacutea en el convento (Resentildea de la literatura del reino de Chile de Joseacute Promis Eddie Morales Pintildea httpwwwupaclpublicaciones2002literatura_promishtm)

149 Son frecuentes las faltas ortograacuteficas Una de ellas es el uso constante del seseo La ausencia de acentua-cioacuten y puntuacioacuten exceptuando alguacuten punto o coma arbitrario no seguido casi nunca de mayuacutescula inicial lo mismo que el uso igualmente aribitrario de la h o de b v r q g j m n x etc No olvidemos de la misma forma la laxitud linguumliacutestica existente en el siglo XVII (no sabemos a queacute parte de eacuteste pertenece el manuscrito) asiacute como la joven edad de la monja

171ESPANtildeOLAS DE ULTRAMAR EN LA HISTORIA Y EN LA LITERATURA

Los versos del presente manuscrito poseen la misma fuerza que tiene su prosa Con una estructura estroacutefica indefinida estaacuten aparentemente corregidos por alguien que tu-vo la oportunidad de conocer personalmente a la autora Muy probablemente se trate del padre al que hace referencia al principio del primer manuscrito laquoMandame el Pd que le declare en que consiste un verdadero amor a Diosraquo a continuacioacuten continuacutea con su caracteriacutestica humildad laquo[O]bedesere y dire lo q Dios me inspire segun mi rudesa y simplisidadraquo (Mss 12959 26) En cuanto a la fuerza pasional de esta joven observamos con cierta tristeza coacutemo aparece sublimada en sus escritos con toda la enegiacutea de una joven mujer llena de intensidad y vida pero encerrada en los liacutemites de un convento Veamos un ejemplo en donde responde el Alma en los siguientes versos

O mi enamorado Jesus O mi dulse y tierno amanteO alegria de los sielos O dulse Jesus amable

(Toda Sentildeor me derrito toda Sentildeor me desagoy quiero vivir por ti ea sentildeor abrasadme) [Tachado en el original]

Toda Sentildeor me derrito toda Sentildeor me desagoy quiero morir por vos ea Sentildeor que ya acabo

Ya tus amores me llaman ya tus perfumes me traencon suspiros y agonias Sentildeor hasta que te alcanse

O mi Jesus amoroso no puedo mas dilatarmeya la pasiensia me falta dulse Jesus abrasadme

(No puedo vivir sin vos no puedo mas dilatarmeya la pasiensia me falta dulse) [Tachado en el original]

No puedo vivir sin vos mi dulse Jesus amablepues me teneis echisada siendo mi esposo y mi Padre

Ay que me abraso Ay que me quemo del Amor deJesus nasareno como no tocan y tantildeen a fuego150

Estos versos llenos de arrebato sublimado conectan con toda la tradicioacuten miacutestica es-pantildeola que se remonta a Ramoacuten Llul y que culmina en el maacutes universal de nuestros

150 En toda la fuerza y simbologiacutea del amor maacutes iacutentimo del maacutes alto y sublime placer de la unioacuten de los amantes tal como lo encontramos en el Cantar de los Cantares y en San Juan de la Cruz Leemos en la Biblia

Ya me he quitado la tuacutenica iquestCoacutemo volver a vestirme Ya me he lavado los pies iquestCoacutemo volver a ensuciarlosMi amado metioacute su mano por el agujero (de la llave) y mis entrantildeas se estremecieron por eacutel Me levanteacute para abrir a mi amado Mis manos destilaron mirra y mis dedos mirra exquisita en el pestillo de la cerradura (5 3-5)

Nos ocurre lo mismo con San Juan de la Cruz en su insuperable poema laquoLlama de amor vivaraquo

iexclOh cauterio suaveiexclOh regalada llagaiexclOh mano blanda iexclOh toque delicadoque a vida eterna sabey toda deuda pagaMatando muerte en vida la has trocado

172 JUAN FRANCISCO MAURA

miacutesticos San Juan de la Cruz Esta tradicioacuten se extiende hasta finales del siglo XVII esto es hasta los finales del Barroco siendo un poco maacutes tardiacuteo en la Ameacuterica espantildeola Sin tener como propoacutesito discutir en el presente trabajo a queacute corriente miacutestica pertenece la obra de Sor Nada es necesario resaltar no obstante el hecho de que estaacute escrito por una mujer y ademaacutes de tierna edad El manuscrito 12959 Caja 26 termina con estas pa-labras laquo[T]odas estas boverias escrivi por entretenimiento siendo resien profesa en la religion Sor Nadaraquo Mas no por la juventud de su autora los escritos dejan de tener lo-gradas metaacuteforas imaacutegenes y siacutembolos sacados de la naturaleza La alegoriacutea de la unioacuten matrimonial poseeacute el fuego liacuterico de la maacutes apasionada de las relaciones amorosas vivi-ficada por perfumes flores insectos animales escarchas nieves o abrojos Por lo tanto aunque la narracioacuten destile cierta ingenuidad no carece por ello de un vocabulario rico con el sabor popular de la poesiacutea de los cancioneros y romances de tradicioacuten renacen-tista No ha sido otra mi intencioacuten que la de rescatar del olvido unos escritos en prosa y en verso llenos de frescura y espontaneidad que nos muestran la pasioacuten con que la joven novicia se laquoentrega en cuerpo y almaraquo a los menesteres de su profesioacuten guiada por un padre espiritual en esos primeros antildeos de formacioacuten Esta ha sido la razoacuten por la que presento a continuacioacuten el citado manuscrito en su totalidad

Sor Nada (Mss 1295928)

laquoEsplicacion sobre en que consiste la paz del AlmaraquolaquoQuartillas a un Alma que padece soledad interiorraquo

[7 hojas utiles en 4ordm letra del siglo XVII]

+

Esplicacion sobre en que consiste la paz del Alma

Pareseme segun mi rudo entender que la verdadera paz del Alma con-siste en una muy pura y buena consiencia en un corason liso y bien intensionado en una verdadera rectitud de espiritu en el qual el Alma procura bolar a Dios sin jamas detenerse a respetos umanos ni reparar en que me diran ni de que me censuraran sino me apresuro a seguir a unos entenderes y pareseres dorados en los quales pretende el mundo engantildear y ensuciar si se puede la puresa de un corason unicamente de Dios y de su Santa ley y se lo conserva cristalino con la divina asis-tencia de la gracia y comprendido de su Amor y temor siguiendo la luz divina de tan amante Sentildeor Dios y ombre verdadero con que este ilustrado corason ni se altera ni se mueve por los disfrasses dorados que ase el mundo y sus moradores mayormente con falssas amistades aunque con ellos muestre buena intension Con la misma grasia y luz de Dios conose el buen corason estos disfrasses que le ase el mundo y se retira de todo con espiritu y valor esto sin la menor alterasion sino que en suma paz se retira a buscar a Dios dentro de su mismo corason

173ESPANtildeOLAS DE ULTRAMAR EN LA HISTORIA Y EN LA LITERATURA

y se abrasa con su pura verdad en la qual se le descubren mil interio-res secretos tan solidos puros y verdaderos que la misma Alma queda abismada y de puro grandes no los puede bien comprender ni esplicar pero estos mismos secretos divinos le sirven de espuelas para no solo correr sino bolar con pies de plumas en seguimiento de su bien ama-do Jesus y como este soberano Sentildeor es tan amante de sus espossas las Almas luego que la ve bolar con pies de plumas la sale al encuen-tro en despoblado campo que se deve de llamar Campo de Amor de Dios y el mismo Sentildeor se viene a las manos por ser Dios que nos ama con Amor infinito de Padre benigno y amoroso con que asiendose en contra deso este divino enamorado en lo interyor de el Alma que le busca con ansias de servirle y amarle y en aquella soledad traban una conversasion amorosa y sensilla como la pluma simple de quien esto escrive

Divino enquentroDios y el Alma en la soledad

O Soberano Principe de la paz dise el Alma tus perfumes me traen a ti bolando porque alla en el mundo y sus valedores me pretendian engantildear y entretenerme con pegaminossas amistades que facilmen-te me pudieran envenenar y matarme apartandome de ti Mi dulse Jesus amable mi Redentor Soberano que con tantas ansias me sales al enquentro como siervo [ciervo] erido de mis Amores los quales tu Amor me ofrese para que con tu mismo Amor te ame y te sirva en paz sin perturbarme ni contristarme ni cansarme de padeser pasando si se ofrese por escarchas nieves espinas ni abrojos ni por otros diverssos trabajos ni piedras de contradision que tu me puedes permitir pues por mas que el mar se levante con sus ferosses olas contra mi ni piedras se me tiren al rostro en todo Sentildeor me quieres con serenidad pasifica sin la menor perturbasion Todo Sentildeor quieres que lo tome con Serenidad de espiritu y asi vengo a ti bolando para que mejor me ensentildees a vivir segun las leyes de tu noble condision que me son muy agradables por mas que el mundo me las despresie por segir sus vanidades y torsidas intensiones con apariensias de bien y con este engantildeo y bien me quie-ro mas a mi que no a mi proximo veo que segun mi pareser se pierden muchas Almas y tambien de aquellos que se depresian y pasan por muy espirituales Con que me paresen pocos los que llegan a padeser con desnudes151 de espiritu por tu purisimo Amor y me parese essas se quedan muy atrasadas en la virtud por el peligro de bolver muy atras el paso de modo que se pueden despentildear y pereser en su misma desgra-sia ya por soberbia o por otras enfermedades que se les pega al corason y asi lo pasan como siegos ignorantes sin advertir en sus peligros

151 La letra en cursiva es miacutea

174 JUAN FRANCISCO MAURA

este aquerdo Sentildeor y otros que tu verdad me ensentildea me ase venir uyendo de las paredes del mundo y me vengo a ti Dios mio bolando con las dos Alas del Amor y temor que tu mismo Amor me ofrese tan de gracia y tan de grado que no se duentildeo mio con que lo responder a tan soberano beneficio y finesa de tus entrantildeas de Amorvengo Sentildeor y esposo mio unicamente a descansar en ti pues los peli-gros del camino me an puesto en mucho sobresalto temiendo el per-derte y sin ti perderme para siempre por una eternidad sin fin pues deseo amado mio ganarme ganandote a ti y vivir en ti aora en vida y despues eternamente y estos cuidados me traen fatigada molida y cansada y no podre tener alivio y descanso sino viendome entre tus brassos aunque sea estando en cruz pues ese es el fin de mis deseos vivir y morir en ti ablame mi cordero manso y ensentildeame a que ver-daderamente te ame como fiel esposa ea mi caro amigo dame la ma-no pues sabes Amor mio que en mi no ay mano sin tu misma mano y asi mi Dios y Sentildeor mi Principe Soberano con umilde rendimiento y deseos de alcansarte te suplico me des la mano y me consueles en estos mis trabajos Deseo Sentildeor vivir en paz y los malos amores de mi Naturaleza flaca no me dejan detentar y no quieren por mi desgrasia atropellar con las leyes de tu Amor ni quisiera perturbar mi corason quando me veo con un torvellino de olas y contratiempos que a menu-do me suelen sercar pero si tu Sentildeor me das la mano nada temo sino que me aseguro y vivire en paz sin que me fatiguen los contratiempos pues mi mano en la tuya y mi espiritu en el tuyo por mas borrascas que me envistan no seran bastantes para rendir mi voluntad a la suya bien si para pronunsiar un fiat que resuene bien atras en tus oidos y que en medio de mis fatigas me ponga a cantar tus divinas misericor-dias hea Sentildeor ya pretendo serrar mis labios por no desir mas bove-rias y deseo Sentildeor oir tus palabras de vida eterna abla Sentildeor que tu sierva oye con atension y cuydado mira mi Dios que se me ase tarde y espero con prisa deseando saborearme y aprovecharme de los ecos de tu Santa dotrina pues todas tus palabras saben a eterna vida callen pues mis sentidos y potensias y todo se ponga en paz pues mi dulse y soberano Sentildeor no se escusara de ablar me aun que en mudo silensio hea mi gran Prinsipe de la paz ablame que tus puros amores me traen perdida por estos asperos montes y mis cortos pasos no te pueden dar alcanse mirame mi Dios a tus pies postrada como un vil gusano y me-nor ormiga de la tierraabla Jesus y dise a su esposa el Alma querida esposa mia que me pides y por que te muestras tan fatigada y mal sufrida no vives como corde-rita del campo buscando de mis pechos el sustancial pasto mi Amor no te sustenta y mi grasia te promete eterna vida pues dime amada de que te fatigas y te muestras mal sufrida mira que te amo con Amor de padre y con Amor de esposo el mas fino y puro enamorado que no tan solo me presio de darte mi mano sino tambien todo mi cuerpo y

175ESPANtildeOLAS DE ULTRAMAR EN LA HISTORIA Y EN LA LITERATURA

sangre para que con mi pan de vida te sustentes y te regales a tus an-churas y que con mi propio espiritu vivas en paz como tu lo deseas y que mis amores sean unico alivio en tus trabajos en esta mortal vida pues si esto es asi y sabes que muero por darte vida dime esposa mia de que te fatigas Dame querida tus brassos y dime si me amas como yo te amoResponde el Alma152 Tu mi Dios sabes si yo te amo pues de mi solo se que mis deseos y ansias buelan a ti mas no alcanso a saber si te amo como tu de-seas ser amado y como desconfio tanto de mi y de mis prosederes falssos temo Dios mio perderme y perderte y asi Sentildeor pues no desechas mis Amores y te muestras tan fino en amarme te pido me ensentildees a vivir segun las leyes de tu pura verdad y fina condisionhija mia dise Dios la prueva de un verdadero Amor consiste en sufrir callar y padeser por mi unico Amor y en todo seguir mis pasos sin ja-mas retroseder por mas fragoso que se muestre el camino pues nunca seran tantas las espinas las escarchas ni las nieves ni los vientos bo-rrascosos que te se ofrescan pasar por mi Amor como los que mi tierno y desinteresado Amor paso por ti y siempre con mis pies descalssos y asi hija y esposa mia muestrate costante en seguir lo perfecto de mis passos pues mi braso fuerte sera en ti y peleara por ti y te sera el todo en tus nesesidades y mi Amor te convertira en dulse y suave lo amargo y molesto a la condision de la carrne

Responde el Alma

O mi enamorado Jesus O mi dulse y tierno amanteO alegria de los sielos O dulse Jesus amable

(Toda Sentildeor me derrito toda Sentildeor me desagoy quiero vivir por ti ea sentildeor abrasadme) [Tachado en el original]

Toda Sentildeor me derrito toda Sentildeor me desagoy quiero morir por vos ea Sentildeor que ya acabo

Ya tus amores me llaman ya tus perfumes me traencon suspiros y agonias Sentildeor asta que te alcanse

O mi Jesus amoroso no puedo mas dilatarmeya la pasiensia me falta dulse Jesus abrasadme

(No puedo vivir sin vos no puedo mas dilatarmeya la pasiensia me falta dulse) [Tachado en el original]

No puedo vivir sin vos mi dulse Jesus amablepues me teneis echisada siendo mi esposo y mi Padre

152 La aparicioacuten de una mayuacutescula al principio de una oracioacuten es algo totalmente arbitrario en este ma-nuscrito dada la libertad ortograacutefica de la autora Como se puede observar en la mayor parte de las veces no es el caso

176 JUAN FRANCISCO MAURA

Ay que me abraso Ay que me quemo del Amor deJesus nasareno como no tocan y tantildeen a fuego

Responde Jesus Hija mia tus simples vozes oygo y aunque resuenan bien a mis oidos pero te deseo mas mansa y pasifica en tus fervores ya sabes que no siempre as de vivir en mantillas ni a los pechos de tu Madre por que es rason que padescas con espiritu fuerte como mu-jer valerosa por que a una esposa del Rey soberano y prinsipe de la paz no le estan bien chiquerias ni fervores de nintildea malcriada y ya es ora que la destete su Madre la Naturaleza y que empesando su nueva vida camine con el favor de mi grasia sigiendo mis passos de eterna vida esto con sus pies descalssos segun mis leyes de Amor puro y desinteresado lo tienen ordenado153 y vivir en paz como lo deje en-cargado a mis apostoles Santos repitiendoles varias vezes Vivir en pas y caridad esto es un vivir en Dios y Dios en el Alma y asi hija mia el Alma que vive en paz vive en mi Como mis cortesanos en el cielo y pues me pides que te ensentildee a vivir segun las leyes de mi condision Repito el desir que te debes mostrar sufrida en todo tiempo y estado sin permitir en tu corason que ni aun los fervores se adelanten con estremos ni ademanes sino atiende y aprende de mi purisima Madre pues siempre la veras si bien lo consideras que mientras vivio en el mundo en todos sus trabajos se mostro firme fuerte costante como piedra diamante Pues mirandome nintildeo entre sus brasos desnudo en el pesebre desnudo y crusificado en los brassos de una cruz En estos y otros passos no se mudo su rostro sino que en suma serenidad y pasifico corason toda se sacrificaba enteramente en los brassos de mi Amor y rendido su corason y voluntad en la de mi eterno Padre por ejemplo te la doy y deseo que aprendas de sus nobles calidades pues te aseguro carisima que las leyes de mi condision y pura verdad todo lo allaras enserrado en el corason de mi purisima Madre sedle fiel y descansaras en paz

+

Quartillas a un alma que padese soledad interior

1Un Alma afligida y tristese ve en un campo desiertay en el su esposo la tieneAtormentada y sedienta

153 Es a traveacutes de estas liacuteneas lo que hace suponer que la autora de este diaacutelogo amoroso entre el Alma y Je-suacutes es novicia esto es laquoque estaacute empesando su nueva vidaraquo En las mismas liacuteneas una vez maacutes se hace alusioacuten al laquodesteteraquo de su vida civil laquoa una esposa del Rey soberano y principe de la paz no le estan bien chiquerias ni fervores de nintildea malcriada y ya es ora que la destete su Madre la naturalesaraquo (fol 5)

177ESPANtildeOLAS DE ULTRAMAR EN LA HISTORIA Y EN LA LITERATURA

2Pendiente se ve en el AyreSolo un hilo la sustentasin tocar el pie en el sueloporque del no tome tierra

3Mirandola esta yto a ytoaquel sol que la atraviesay la enviste con sus rayosmas ella no pestantildeea

4Como sigarra padese y como a tal se atormentabatiendo sus mismas Alasy el corason se atraviesa

5Con penas sustos temoresquando se mira assi mesmasin tener valor en nadaporque es la misma flaquesa

6Pero el Amor de su esposotoda su atension le llevay la pone en un abismopero cubierto en tiniebla

7Desea dar algun bueloy subir con ligeresapero se mira travadacon una fuerte cadena

8Clama suspira y padeseMas del todo se sujetaRindiendo su voluntadA la divina clemencia

9Los enemigos del AlmaCruelmente le asen guerray ella aunque firme y constantelos reselos la atormentan

178 JUAN FRANCISCO MAURA

10de todos modos padeseaunque gosa la asistensiadel divino esposo amadoque en su interior se recrea

11Solo de verla penary con verla tan serenadise resibe mil gustosde su sigarra pequentildea

12Le sabe el mundo a mil yelesy su trato le atormentaviendo en el mil falsedadesque todas saben a tierra

13Para poderse librardeja de correr y buelacon las Alas del Amory el mismo Amor se la lleva

Una vida dedicada a un amor divino un amor que le haraacute llenar un buen nuacutemero de cuartillas dedicadas a tan alta empresa Se desconoce si la vocacioacuten de Sor Nada con-tinuoacute con tanta intensidad el resto de sus diacuteas Ciertamente la vida en el covento no era faacutecil En algunos casos la experiencia era traumaacutetica incluso fatal para algunas de las adolescentes de la Ameacuterica Espantildeola Las reglas del claustro eran severas por varias razones Estas joacutevenes si no teniacutean el permiso de la superiora no podiacutean recibir visitas no podiacutean volver a sus casas su correspondencia era censuraba y no podiacutean salir del periacutemetro conventual Igualmente se levantaban antes del amanecer para oir misa tra-bajaban el resto del diacutea y lo maacutes interesante es que muchas veces esta vida era aceptada por muchas

Page 10: Tercera parte: Mujeres en la vida intelectual - …parnaseo.uv.es/Editorial/Maura/TerceraParte.pdf · La Biblia, por su parte, hace repetidas menciones de la mujer y sobre el comporta-

140 JUAN FRANCISCO MAURA

con el infatigable y genial Lope de Vega que la elogioacute en su obra El laurel de Apolo laquoNo desaprovechoacute Dontildea Mariacutea ninguna ocasioacuten de abogar por las mujeres contra la tiraniacutea de los hombres suponiendo que como deacutespotas las quieren ignorantes para tenerlas sujetasraquo (E Fernaacutendez de Navarrete xcvi)

Pero no tiene que ser exclusivamente una mujer la que defienda los atributos y los derechos de su sexo Se podriacutean citar varios ejemplos donde desde los inicios de las letras espantildeolas la mujer aparece comprendida e incluso defendida por escritores con-temporaacuteneos Veacuteanse los siguientes versos escritos en el siglo XIV por el genial Arcipres-te de Hita

Mujeres abrid los oiacutedos y escuchad una buena leccioacuten escuchad estas palabras guardaos del varoacuteniexclGuardaos no os acaezca como el leoacutenal asno sin orejas y sin su corazoacuten(892)133

No se puede despreciar la influencia que tuvo en la Espantildea del siglo XVI Erasmo de Roacutetterdam el intelectual maacutes reputado de su tiempo Erasmo con una clarividencia mental poco comuacuten trata de los temas maacutes cotidianos asiacute como de los maacutes profun-dos Sus escritos siempre al borde de lo hereacutetico dejaron bien claro su independencia ideoloacutegica Tambieacuten supo dar su opinioacuten sobre las mujeres y de la importancia que una buena educacioacuten supondriacutea a la hora de llevar a cabo las tareas diarias

With regard to female education Erasmus is unequivocal In Abbatis et eruditae he categorically states that education and learning are as desirable in a woman as in a man And although there is naturally no suggestion that the education and learning should be directed towards a career there are no carping restrictions as to what the education should consist of or where the learning should end (McKendrick 9)

Fue una mujer en particular la que llamoacute la atencioacuten del erudito holandeacutes Catalina de Aragoacuten hija de Isabel la Catoacutelica Grandes debieron ser las virtudes de esta dama cuando tan renombrados laquolibrepensadoresraquo la calificaban como laquomilagro del aprendi-zaje femeninoraquo

At the centre of the movement was a Spanish woman Catherine of Aragon first wife of Henry VIII of England Her mother Isabel la Catoacutelica had made sure that Catherine and her sisters received an advanced and enlightened education under two eminent Italian hu-manists Antonio and Alessandro Geraldini and Catherine herself was considered by Erasmus and Sir Thomas Moore to be a miracle of fe-male learning At her request Juan Luis Vives between 1524 and 1528 wrote his De institutione feminae christianae for her daughter Mary and he dedicated it to Catherine (McKendrick 6)

La pobre Catalina ya presagiaba su triste final Existe una dramaacutetica y muy poco co-nocida carta conservada en la Academia de la Historia donde eacutesta escribe a su sobrino el emperador Carlos V pidieacutendole ayuda y proteccioacuten a su desesperada situacioacuten en Inglaterra

133 Juan Ruiz Libro de Buen Amor 193

141ESPANtildeOLAS DE ULTRAMAR EN LA HISTORIA Y EN LA LITERATURA

Muy alto y poderoso sentildeor por las letras que a vuestra magestad e escrito a visto el tenor que siempre en este my negocio e tenido agora que veo el peligro que tanto tiempo lo e esperado torno a suplicar lo mismo que asta agora e echo y es que por permisioacuten de dios y por el deudo y sangre que entre vuestra magestad y my ay quiero de vos es-pecial memoria del peligro en que estoy y de los ynconvenientes que se espera allende que dios muy grande mire para ofendido si el Rey my sentildeor pone en efecto lo que todo este reyno tome en este parlamento de todo lo que para estar informado vuestra magestad por su embaxa-dor que aquiacute reside para el remedio tengo esperanza en dios bastaraacute lo que vuestra alteza proveeraacute conque se aga con tiempo no tengo maacutes que decir sino que todo ese reyno y maacutes los perlados y doctas personas que en esta causa defienden estaacuten muy sentidos de la dilacioacuten que su santidad del papa en este negocio a dado y quexanse mucho dello pues por vuestra parte nunca sino justicia se le a demandado y estaacuten el diacutea de oy tan firmes como asta agora para averlo de declarar donde fueren y debe ser entyendese esto poniendo la question como puacuteblicamente se platica que para en lo secreto no ay necesidad de ablar en ello y crea vuestra magestad de que esta verdad y dios me sostienen porque para proseguir mis trabajos no vastaraacute cuerpo humano y confiando en eacutel le suplico guarde la vida de vuestra magestad y acreciente su estado como yo deseo Degramache a 11 de enero= Humilde tiacutea de vuestra magestad= Catalina (RAH Atoacutegrafo precioso Caja 3 Nuacutem 23 Dontildea Catalina de Aragoacuten Reina de Inglaterra Antildeo 1530 Carta al emperador Carlos V pidieacutendole proteccioacuten)

La pobre Catalina presagiaba su triste fin ya que seis antildeos despueacutes la que fuera hija menor de los Reyes Catoacutelicos pasariacutea a mejor vida El no haber podido dar un hijo he-redero al rey Enrique VIII hizo que eacuteste se casase con Ana Bolena declarando nulo su matrimonio anterior sin consentimiento del Papa Roma le excomulgoacute pero eacutel mismo se proclamoacute jefe de la iglesia anglicana A pesar de todo Catalina muere enamorada de su marido y estas uacuteltimas liacuteneas con las que termina su uacuteltima carta y su vida son sufi-cientemente expliacutecitas laquoJuro que sobre todas las cosas mis ojos desean volver a verosraquo (Ximeacutenez de Sandoval 131)

Pese a la enorme influencia directa o indirecta que Erasmo tuviese sobre los pensado-res de la Espantildea del siglo XVI no debemos dejar de destacar tambieacuten la de Fray Luis de Leoacuten tanto por su cariz independiente como por ser un defensor de la libertad indivi-dual Auacuten siendo un representante de la iglesia Catoacutelica tuvo como se sabe que sufrir sus criacuteticas y el rechazo a la exposicioacuten de sus ideas escritos y traducciones biacuteblicas Fray Luis en su obra La perfecta casada deja clara su idea sobre la mujer y la funcioacuten que eacutesta debiacutea ocupar en la sociedad que le tocoacute vivir Para Fray Luis la mujer no era una imagen idealizada del laquoamor corteacutesraquo como la de los escritores neoplatoacutenicos sino un ser de carne y hueso con derechos y responsabilidades en la sociedad de igual manera que el hombre (McKendric 10)

Seriacutea exagerado afirmar que Fray Luis de Leoacuten pone a la mujer por encima del hom-bre en el contexto social Sin embargo y siempre teniendo en cuenta las limitaciones a

142 JUAN FRANCISCO MAURA

las que su profesioacuten y su tiempo le obligaban procura dejar claro que la mujer (casada) merece todo el respeto y ayuda que sea posible de su marido

Porque aunque es verdad que la naturaleza y estado pone obligacioacuten en la casada como decimos de mirar por su casa y de alegrar y des-cuidar continuamente a su marido de la cual ninguna mala condicioacuten de eacutel la desobliga pero no por eso han de pensar que ellos tienen licencia para serles leones y para hacerlas esclavas antes como en todo lo de-maacutes es la cabeza el hombre asiacute todo este trato amoroso y honroso ha de ser principio del marido Porque ha de entender que es compantildeera suya o por mejor decir parte de su cuerpo (Fray Luis de Leoacuten 21 cap 3)

En el reciente estudio de Mar Martiacutenez Goacutengora Discursos sobre la mujer en el Huma-nismo renacentista espantildeol se presenta esa posicioacuten ambigua del fraile agustino en refe-rencia a la funcioacuten de la mujer en la sociedad renacentista

Fray Luis se opone a la funcioacuten otorgada en la eacutepoca a la mujer de mera imagen pasiva Sin embargo fray Luis totalmente encardinado en la cultura del Renacimiento es consciente de la imposibilidad de ignorar ciertos presupuestos De ahiacute la frecuencia en la que el autor anima a las mujeres a buscar una laquofamaraquo puacuteblica que soacutelo una voz masculina puede proveerles Si la mujer desempentildea perfectamente su funcioacuten de casada el marido recibiraacute honra haciendo posible para ella ser alabada por los miembros de la comunidad (187)

Ya se ha mencionado a Isabel la Catoacutelica como impulsora de toda la empresa ultra-marina pero es precisamente gracias a su influencia cuando se pone de moda entre di-versas damas de su tiempo mdashsiglos XV y XVImdash la praacutectica de ciertos estudios y ciencias Beatriz Galindo conocida popularmente como laquoLa latinaraquo fue la que ensentildeoacute latiacuten a la reina Isabel Dice Juliaacuten Juderiacuteas en su obra La Leyenda Negra laquoA los hombres se unen las mujeres en este afaacuten de saber y vemos a Dontildea Beatriz Galindo maestra de latiacuten de la Reina a dontildea Luciacutea de Medrano que explicoacute los claacutesicos en Salamanca a dontildea Fran-cisca de Lebrija que desempentildeoacute una caacutetedra de retoacuterica en la Universidad de Alcalaacuteraquo (Juderiacuteas 74)

Nos cuenta Eustaquio Fernaacutendez de Navarrete que a la muerte del ceacutelebre Antonio de Nebrija quien a impulsos de la reina catoacutelica publicase la primera gramaacutetica europea en lengua romance su hija Antonia le supliacutea en las clases de filosofiacutea y retoacuterica en la Uni-versidad de Alcalaacute cuando eacuteste se encontraba ya viejo y enfermo (xcvi)

No existe ninguna razoacuten para pensar que las las mujeres de clases maacutes favorecidas que pasaron al Nuevo Mundo no disfrutaran de los mismos beneficios y libertades que sus homoacutelogas peninsulares Seraacute preciacutesamente uno de los hijos del mismo Antonio de Nebrija el doctor Sancho de Lebrija quien se encargue de dar poder a Antoacuten Pareja sastre para que la obra escrita de su padre tanto en latiacuten como en romance se distri-buya y venda laquoasiacute en Indias como en otras partesraquo (AHPS Libro del antildeo 1536 Oficio IV Fragmento de un libro Escribaniacutea Cristoacutebal Becerra Folio Primer tercio del legajo Fe-cha 31 de diciembre) En cuanto a las clases menos favorecidas la monarquiacutea espantildeola se preocupoacute desde un primer momento de alfabetizar a todos sus suacutebditos hembras y varones incluyendo los naturales de los territorios conquistados

143ESPANtildeOLAS DE ULTRAMAR EN LA HISTORIA Y EN LA LITERATURA

La educacioacuten de los indiacutegenas americanos fue una sincera preocupa-cioacuten de los reyes de Espantildea casi desde el descubrimiento del Nuevo Mundo Entre las primeras instrucciones de los Reyes Catoacutelicos a sus gobernadores de las Islas Antillas figuran las dadas a Nicolaacutes de Ovan-do en 1503 ordenaacutendole levantar en cada pueblo una escuela junto a la iglesia laquoen la que todos los nintildeos que hubiere en cada una de dichas poblaciones se junten dos veces al diacutea para que alliacute el capellaacuten les ensentildee a leer y a escribirraquo (Vega 9-10)

En la obra renacentista de Cristoacutebal de Villaloacuten El Crotaloacuten se ofrecen unas imaacutegenes muy graacuteficas de las mujeres de la eacutepoca y del laquoexceso de libertadraquo que seguacuten el autor en boca de uno de sus personajes disfrutaban Desde el punto de vista antropoloacutegico y social las siguientes liacuteneas ofrecen una buena imagen de la apariencia fiacutesica de las mujeres de su tiempo y de su actitud vista desde la perspectiva parcial del personaje de la obra

Pues aun no pienses Demophon que la vanidad y perdicioacuten destas livianas mujeres se le ha de pasar a Dios sin castigo que yo te oso afirmar por cosa muy cierta y que no faltaraacute Que por ver Dios su disolucioacuten desenvoltura desverguumlenza y poco recogimiento que en ellas en este tiempo hay visto que asiacute viacutergenes como casadas viudas y solteras todas por un comuacuten viven muy suelta y muy disolutas en su mirar andar y meneo muy curiosas y que por la calle van con un cu-rioso paso en su andar descubierta su cabeza y cabello con grandes y deshonestas crenchas muy alto y estirado el cuello guintildeando con los ojos a todos cuantos topan haciendo con sus cuerpos lascivos meneos (Villaloacuten 860-61 vol 2 canto 20)

El pasaje antes citado pese a parecer humoriacutestico en nuestros diacuteas no lo era tanto en la eacutepoca en que fue escrito ya que la visioacuten de la mujer como parte integrante del pa-trimonio del padre o del marido podiacutea de alguna manera poner en juego laquola honraraquo de su posesor Pese a esto se aprecia como la mujer teniacutea cierto margen de libertad que no se limitaba a las caacutemaras de un convento o a una vida totalmente alejada del mundanal ruido En la siguiente cita continuacioacuten de la anterior se puede observar la serie de ac-cesorios y aderezos que las mujeres de la eacutepoca utilizaban en sus vestidos y cuerpos llamando la atencioacuten la complejidad y sofisticacioacuten de los atuendos descritos

Por esta su comuacuten deshonestidad se cierto que vendraacute tiempo en el cual ha de hacer Dios un gran castigo en ellas pelarse han todos sus cabellos hacieacutendolas a todas calvas y seraacute tiempo en que les quitaraacute Dios todos sus joyeles sortijas manillas zarcillos collares ajorcas y apretadores de cabeza Quitarles ha los partidores de crenchas tenaci-cas salsericas redomillas y platericos de colores y todo geacutenero de afei-tes sahumerios guantes adobados sebos y unturas de manos y otros olores Alfileres agujas prendedores Quitarles ha las camisas muy del-gadas y los manteos vasquintildeas briales saboyanas nazarenas y rebo-cinos y en lugar de aquellos sus cabellos encrespados y enrifados les daraacute pelambre y calvez y en lugar de aquellos apretadores y joyeles

144 JUAN FRANCISCO MAURA

que les cuelgan de la frente les daraacute dolor de cabeza y por cinta de ca-deras de oro muy esmaltadas y labradas les daraacute sogas de muy aacutespero esparto con que se cintildean y aprieten y por aquellos sus muy curiosos y suntuosos ataviacuteos de su cuerpo les daraacute siacutelici y desta manera haraacute Dios que lloren su lascivia y desorden y que de su lujuria y deshonestidad hagan grave penitencia Entonces no habraacute quien las quiera por su he-diondez y miseria en tanto que siete mujeres se encomendaran a un varoacuten y eacutel de todas huiraacute menospreciaacutendolas y aborrecieacutendolas como de gran mal (Villaloacuten 860-61 vol 2 canto 20)

Excelente lista de aderezos femeninos de los cuales pocos son reconocibles en nues-tros diacuteas Gran frustracioacuten debiacutea de tener con las mujeres el autor de estas liacuteneas sien-do al parecer muy poco correspondido por estas uacuteltimas La misoginia que aparece en estas liacuteneas refleja cierta ingenuidad La mujer que se nos presenta debioacute de ser bastante atractiva y sofisticada portando una gran variedad de adornos muchos de ellos de origen oriental y de perfumes que poco tendriacutean que envidiar a los de la mujer moderna En Descripcioacuten breve de toda la tierra del Peruacute Tucumaacuten Riacuteo de la Plata y Chile obra escrita en Chile entre 1603 y 1609 por el padre Reginaldo de Lizarraga nacido en Medelliacuten (Espantildea) en 1545 y trasladado a Ameacuterica a los quince antildeos vemos una asombrosa semejanza con la cita anterior En esta obra del padre dominico dedicada al entonces presidente del Consejo de Indias conde de Lemos observamos coacutemo su descripcioacuten de la vestimenta de las mujeres de Lima ofrece notables semejanzas con la escrita unos antildeos antes en Espantildea En su capiacutetulo 51 titulado laquoDe los vestidos de las mujeresraquo dice lo siguiente

Lo que en esta ciudad [Lima] se admira mucho y aun lo que se ha-biacutea de refrenar es los vestidos y trajes de las mujeres son en esto tan costosas que casi no se sabe como lo pueden sufrir sus maridos La soberbia de ellas es demasiada y no sabemos en lo que han de venir a parar plegue a Dios y no sea en lo que pararon aquellas de quien dice Nuestro Sentildeor Porque las hijas de Sioacuten se ensoberbecieron (esto es las ciudadanas) cuando saliacutean de sus casas llevaban las gargantas ex-tendidas los ojos altos a una y otra parte guintildeaacutendolos los pasos muy compuestos el Sentildeor las volveraacute calvas y les raeraacute los cabellos de sus cabezas les quitaraacute sus chapines y jerbillas bordadas las medias lunas rodetes las cadenas y collares de oro las ajorcas los tocados costosos los punzones de oro para partir las crenchas los zarcillos y los olores los anillos y piedras preciosas etc y por los olores seles daraacute muy pes-tilencial olor y por las cintas de oro sogas de esparto etc No creo yo hay en lo descubierto del mundo ciudad en su tanto ni cuatro veces mayor que a tanta soberbia en este particular como esta nuestra ciu-dad [Lima] llegue acueacuterdome que los antildeos pasados maacutes ha de treinta y ocho que llegando un religioso nuestro de Espantildea nacido y criado en Toledo a nuestro convento de esta ciudad cerca de la fiesta de Cor-pus Christi tratando de ella y de la suntuosidad majestad y riqueza que aquel diacutea en Toledo en calles y ventanas se mostraba le deciacuteamos que no nos espantase porque en nuestra ciudad veriacutea coacutemo no le ha-

145ESPANtildeOLAS DE ULTRAMAR EN LA HISTORIA Y EN LA LITERATURA

ciacutea mucha ventaja Toledo Llegoacute la fiesta vio la riqueza que se mostroacute en los vestidos de las mujeres adornos de ventanas altares y calles dijo que la riqueza de Toledo en este diacutea mostrada no haciacutea muchas ventajas a la de esta ciudad Pues es cierto que hay tanta diferencia de entonces ahora en lo que vamos tratando como de vestidos de aldea a vestidos de corte con justo tiacutetulo se podriacutea moderar por los virreyes esta soberbia pero no seacute por queacute no se modera y siacute seacute por queacute ni los maridos no tienen aacutenimo para moderarlo ni los gobernadores tampo-co (Lizarraga 38 lib 1 cap 51)

Seriacutea injusto y exagerado afirmar que los descubrimientos transoceaacutenicos se hicieron por la presioacuten que ejercieron las mujeres sobre sus amantes para que estos les trajesen laquomaacutes raacutepidamenteraquo todo ese laquosin finraquo de delicadezas exoacuteticas de todo tipo que existiacutean en el Oriente Lo que siacute es cierto es que las mujeres fueron grandes consumidoras de perfumes afeites sedas joyas y otros bienes suntuarios siendo muy conscientes de lo que hoy entendemos como laquomodaraquo Martiacuten Fernaacutendez de Navarrete en su indispensa-ble trabajo sobre los primeros viajes transoceaacutenicos Coleccioacuten de los viajes y descubrimien-tos menciona de paso la situacioacuten de algunas mujeres durante el siglo XV Es precisa-mente esta eacutepoca en la cual portugueses y castellanos entran en conflicto por el control de algunas posesiones en las costas africanas

y crecioacute el lujo a tal extremo que aun las mujeres de los menestrales y artesanos se confundiacutean en los vestidos con las de alto linaje y esta-do usando ropas de ricas telas de seda de oro de lana con forros de martas y pieles y con guarniciones de oro plata y aljoacutefar cuyo gasto por ser ruina de las familias se tratoacute de corregir aunque sin efecto en las Cortes de Palenzuela (M Fernaacutendez de Navarrete 75 21)

El mismo autor resalta la importancia que tuvo para el comercio de Castilla el contar con una buena armada que protegiese a los barcos de piratas y otros peligros Gracias a los inventarios que se han conservado del duque de Beacutejar y de don Alvaro de Zuacutentildeiga conocemos el lujo de estos sentildeores en perlas orientales piedras preciosas telas y demaacutes utensilios de gran valor134 Existe una Real Pragmaacutetica de Fernando el Catoacutelico a Diego Coloacuten en donde aparece nuevamente la conciencia que se teniacutea sobre la manera de ves-tir que deberiacutean llevar las damas castellanas

R PRAGMAacuteTICA SOBRE EL VESTIR Y GASTAR SEDA EN LAS IN-DIAS Valladolid 12 de noviembre de 1509 Don Fernando etc A vos Don Diego Coloacuten nuestro Almirante y Gobernador de las Indias del mar Oceacuteano y a otro cualquier mi Gobernador etc Sepades que yo he sido informado de los muchos gastos y costas que se han hecho y facen y se esperan hacer si yo no lo mando proveer y remediar en el vestir y gastar de las sedas y brocados y bordados en la Isla Espantildeola y en las otras islas y poblaciones de las dichas islas del mar Oceacuteano tra-yendo en ello mucho desorden y yo por el amor y voluntad que tengo

134 AGI Indiferente 418 Libro 2 fol 87v Publicada en DH Am Tom 6 paacutegina 191 DIA Tomo 31 pag 470 DIU Tomo 5 paacuteg 166 Seguacuten la RC a Diego Coloacuten fechada a 14 de noviembre de 1509 es la pragmaacute-tica que se guarda en Castilla sobre la manera de vestir (DIU Tomo 5 paacutegina 174)

146 JUAN FRANCISCO MAURA

a esas dichas Indias y a los pobladores dellas y porque deseo que ellas se aumenten y acrecienten por las haber ganado y descubierto por la gracia de Nuestro Sentildeor con nuestra industria trabajo y costa y los po-bladores dellas no hagan sobre lo suso dicho tan excesivos gastos sino pues que van a ellas con deseo y voluntad de se ayudar y aprovechar del oro que por gracia de Nuestro Sentildeor se descubre de cada diacutea se detengan en lo gastar en semejantes cosas para se aprovechar dellos en otras cosas que maacutes les convenga asiacute para sus personas como para sus haciendas y por evitar y excusar lo suso dicho mandeacute lo platicar con algunos de mi Consejo y por ellos visto se halloacute que porque nuestros suacutebditos y naturales que viven y estaacuten en dichas Indias no gasten sus haciendas en semejantes desoacuterdenes y que las conserven y guarden pa-ra sus menesteres y por el bien y el pro comuacuten de todos generalmente mando dar esta mi carta premaacutetica sancioacuten la cual quiero y mando que haya fuerza y vigor de ley bien ansiacute y a tan cumplidamente como si fuese fecha y promulgada en Cortes por lo cual ordeno y mando que en cuanto a mi merced y voluntad fuere ninguna ni algunas personas de cualquier ley estado condicioacuten que sean que estuvieren de morada o vivienda o en otra cualquier manera en la dicha Isla Espantildeola y en las otras islas desas dichas Indias y tierra firme no puedan traer y traigan ropa alguna de brocado ni de seda ni de chamelote de seda ni zarzahaacuten ni tercenel ni tafetaacuten ni vainas ni correas de espada ni en cinchas ni en sillas ni en alcorques ni en cosa alguna ni tampoco puedan traer ni trai-gan bordados de seda ni chapado de plata ni de oro de martillo ni fila-do ni tejido ni de otra cualquier manera pero que las personas que tu-vieren en las dichas Indias bienes asiacute muebles como raiacuteces que valgan hasta la cuantiacutea de mil castellanos que ellos y los hijos que tuvieren de hasta edad de catorce antildeos traigan jubones y caperuzas y bolsas y ribe-tes y pestantildeas de seda de cualquier color que quisieren con tanto que en una ropa no traigan maacutes de un ribete y que no haya en los dichos ribetes y pestantildeas maacutes anchura de cuanto un dedo pulgar y que no se traiga en los ruedos de las ropas y que puedan traer becas de tercenel y de tafetaacuten y de papahigos de camino aforrados en el mismo tercenel y tafetaacuten y ansiacute mismo permitimos que puedan traer de seda las cora-zas y guarnecer las faldas y gocetes y capacetes y baberas y quejotes y traer cojines de seda en la silla de la jineta y que las mujeres de las tales personas que tuviesen bienes en la dicha cuantiacutea de los dichos mil castellanos y sus hijas siendo doncellas puedan traer gonetes y corseacutes y fajas de dos varas de largo de seda y [borradas dos letras por mancha de tinta] mas y de lo de vestir y mudar cuando quisieren y por bien tuvieren quier sea moyil o faldilla o cota o haacutebito u otra cualquier ropa con tanto que juntamente no puedan vestir ni vistan maacutes de una ni les pongan trepas ni tiras de seda ni de brocado ni de oro tirado ni tejido ni relido ni en las ropas de pantildeo pongan cortapisas ni lisonjas ni trepas ni tiras ni otra guarnicioacuten alguna de seda ni de brocado salvo que puedan traer un ribete o pestantildea de seda de anchura de un dedo pulgar asiacute en

147ESPANtildeOLAS DE ULTRAMAR EN LA HISTORIA Y EN LA LITERATURA

las ropas de seda como en las de pantildeo en los ruedos de las faldas y para las costuras y no otra cosa alguna y que no traigan la dicha seda en las guarniciones de las mulas ni en angarillas ni en sillas ni en pantildeos ni en otra cosa alguna y que ansiacute mismo no puedan traer mantillas de seda ni enforradas en seda sopena que l que contrario hiciere pierda las ro-pas que ansiacute trujere vestidas por primera vez y sea repartido la mitad para el juez que lo juzgare y la otra mitad para el juez que lo acusare y por la segunda que pierda la ropa y se parta como dicho es y sean desterrados de la isla donde viviere para dos antildeos y por cuanto algu-nas personas de los que nuevamente destos reinos de Castillaa van a se avecindar y poblar y estar en las dichas Indias y son de honra acae-ce que no llevan tantos bienes que valgan la dicha cuantiacutea de los mil castellanos que mando que tengan los que hubieren de traer seda en la manera que dicha es que a eacutestos tales no se entienda y extienda lo suso dicho y que puedan traer la dicha seda seguacuten y en la manera que dicha es y no maacutes hasta tanto que haya un antildeo que estaacuten en las dichas Indias que corra y se cuente desde el diacutea que llegare fasta ser cumplido y que siacute cumplido no tuviere bienes que valgan la dicha cuantiacutea de los dichos mil castellanos que no puedan traer seda ninguna so la dicha pena de suso contenida la cual mando a vos las dichas nuestras justi-cias y a cada una de vos que esta mi carta y todo lo en ella contenido y cada cosa y parte dello guardeacuteis y cumplaacuteis y ejecuteacuteis por manera que se cumpla y ejecute lo en ella contenido so pena de perdimiento de los oficios y que seades inhaacutebiles para haber otros semejantes y que pagueis la estimacioacuten de la tal ropa que dejardes de ejecutar y para que lo susodicho sea notorio y ninguno dello pueda pretender ignorancia mando que esta mi carta sea pregonada puacuteblicamente por las plazas y mercados y otros lugares acostumbrados desas dichas islas por prego-nero y ante escribano puacuteblico(Konetzke Coleccioacuten 23)135

Tambieacuten se sabe de las joyas que Rodrigo Ponce de Leoacuten marqueacutes de Caacutediz debioacute dar a dontildea Beatriz Pacheco (M Fernaacutendez de Navarrete 75 22) Lo que siacute queda claro es que la navegacioacuten seraacute a partir de estos antildeos la forma maacutes raacutepida e importante para comerciar con aquellos paiacuteses de Oriente que antes soacutelo era posible alcanzar a traveacutes de rutas terrestres Existe un documento muy representativo de este periodo sobre la posesioacuten de joyas de gran valor por parte de miembros de una de las familias maacutes repre-sentativas residentes en Ameacuterica Los protagonistas son en este caso el almirante Diego Coloacuten y su mujer Mariacutea de Toledo Dice el documento que El jurado Antoacuten Bernal y Juana de Hoces su mujer vecinos de Sevilla en la collacioacuten de Santa Cruz reciben de Diego Coloacuten Almirante de las Indias laquoun joyel muy rico de oro de hechura de escudo que tiene en medio una piedra preciosa grande esmeralda e debaxo de la dicha piedra un rostro de aacutengel labrado en el mismo oro esmaltado e a cada lado del dicho rostro una piedra preciosa diamante pura y debaxo una piedra gruesa pendiente que pesa el dicho

135 AGI Indiferente 418 Libro 2 fol 87v Publicada en DH Am Tom 6 paacutegina 191 DIA Tomo 31 pag 470 DIU Tomo 5 paacuteg 166 Seguacuten la RC a Diego Coloacuten fechada a 14 de noviembre de 1509 es la pragmaacutetica que se guarda en Castilla sobre la manera de vestir (DIU Tomo 5 paacutegina 174)

148 JUAN FRANCISCO MAURA

joyel con todo lo susodicho medio marcoraquo Los citados Antoacuten Bernal y su esposa se dan por pagados de todo lo que se les adeudaba y se obligan a su vez a devolver el joyel al Almirante si este les paga en dinero El 23 de agosto de 1530 siete antildeos despueacutes la virreina canceloacute la anterior obligacioacuten y recuperoacute el mencionado joyel (AHPS Libro del antildeo 1523 Oficio I Escribaniacutea Alonso de la Barrera Folio 1173 Fecha 3 de diciembre) En la misma casa del almirante otra mujer Briolanga Muntildeiz su tiacutea materna se obliga a pagar al mercader genoveacutes Batista Catantildeo 22 ducados de oro laquopor cierto raso que le comproacute y habiacutea de ser pagado en el puerto de Santo Domingoraquo (AHPS Libro del antildeo 1509 Oficio V Libro uacutenico Escribaniacutea Francisco Esquibel Folio Primer tercio del lega-jo Fecha 9 de marzo) Dontildea Briolanga recibiacutea cada antildeo para su mantenimiento 100000 maravediacutes del almirante mayor de las Indias por medio de Gaspar Gurricio monje del monasterio de Santa Mariacutea de las Cuevas (AHPS Libro 1510 Oficio XV Libro II Es-cribaniacutea Bernal Gonzaacutelez Vallesillo Folio primer tercio del legajo Fecha 4 de julio) Resulta interesante hacer notar la temprana presencia (1516) de un ingleacutes en Santo Domingo involucrado igualmente en la compra de telas Se trata de laquoNicolas Arnoteraquo residente en Santo Domingo que debe pagar a Mariacutea Caldera mujer del comendador Diego Barbosa el valor de una cama de sargas de colores de Flandes (AHPS Libro del antildeo 1516 Oficio XV Libro II Escribaniacutea Bernal Gonzaacutelez Vallesillo Folio Primer tercio del legajo Fecha 28 de agosto) Sin embargo anteriormente a esa fecha (1514) encontramos a un veneciano casado con una inglesa mucho maacutes ceacutelebre en sus viajes trasoceaacutenicos laquoSevastiaacuten Cavotoraquo capitaacuten del rey don Fernando y vecino de Sevilla136

De forma paralela se observa tambieacuten un cierto desenvolvimiento de la mujer en su medio lo que equivaliacutea a intercambios de informacioacuten a todos los niveles incluyendo por lo tanto el cultural No era extrantildeo que tuviesen libros de comedias a mano y que llegasen incluso a escribir comedias ellas mismas Efectivamente la sospecha de que las damas llegasen a escribir comedias estaba bien fundada Veacuteanse algunos ejemplos Ana Caro Malleacuten de Soto una de las maacutes famosas dramaturgas de la Sevilla del siglo XVII autora de El conde de Partinupleacutes utiliza el tema del amor en sus maacutes diversas variantes fiacutesicas y espirituales como el eje de casi todas sus obras (Perry 57) Este hecho por otra parte indica el favor del puacuteblico ante un tema tan popular Veacutease otro ejemplo

The drama of this period did not present love and marriage as a simple partnership however and many dramatists contrasted laquoprofaneraquo with laquohonestraquo love Feliciana Enriacutequez de Guzmaacuten who wrote Tragicome-dia Los jardines y campos sabeos in Seville in the early seventeenth cen-tury presented the hero Clarisel as the victim of laquopervertedraquo and fickle Belidiana in part 1 so blinded by her beauty that he feels himself laquoin shackles and in chainsraquo (Perry 57)

Pero las damas espantildeolas de esta eacutepoca no soacutelo escribiacutean comedias algunas tambieacuten se aventuraron a escribir tratados cientiacuteficos Uno de estos casos fue el de Oliva Sabu-co de Nantes Barrera que a finales del siglo xvi escribioacute un tratado meacutedico sobre la naturaleza humana advirtiendo que la lujuria podiacutea perjudicar al cuerpo Se basaba en

136 Sebastiaacuten Caboto o laquoSevastiaacuten Cavotoraquo estaba casado con Juana Cavoto vecina que fue de la ciudad de Londres en la parroquia de San Gil (AHPS Libro del antildeo 1514 Oficio I Libro II Escribaniacutea Mateo de la Cuadra Folio 253 Fecha 14 de Septiembre) citado en CFAAPS Vol 3 doc 128 p 37

149ESPANtildeOLAS DE ULTRAMAR EN LA HISTORIA Y EN LA LITERATURA

la presuncioacuten de que la lujuria provocaba que el cerebro emitiese un liacutequido que iba al estoacutemago enfriaacutendolo y debilitaacutendolo interrumpiendo de esta manera las funciones vitales (Perry 58)

Se sabe que en la eacutepoca de Isabel la Catoacutelica habiacutea muchas mujeres estudiantes y que la propia reina las impulsaba a estos menesteres iniciativa que obtuvo sus frutos en las deacutecadas siguientes Ademaacutes de las conocidas novelistas Mariacutea de Zayas y Sotomayor y dontildea Mariana de Carvajal existioacute toda una serie de escritoras de todos los geacuteneros lite-rarios que florecieron a ambos lados del Atlaacutentico y que no solamente llaman la aten-cioacuten por su nuacutemero sino por la calidad de sus obras Algunas de ellas como dontildea Luisa de Padilla condesa de Aranda calificada por Serrano y Sanz como laquola maacutes notable de cuantas florecieron en Espantildea en el siglo XVIIraquo personificaraacuten a la perfeccioacuten a este tipo de mujeres Tambieacuten deberiacuteamos saber cuaacutentas seriacutean las mujeres que escribieron con pseudoacutenimos masculinos

La informacioacuten sobre las diferentes facetas de la vida femenil con que contamos no es abundante A pesar de todo podemos hacernos una idea maacutes clara de la verdadera situacioacuten de la mujer a traveacutes de una nueva interpretacioacuten de los textos tanto de los medievales como de las croacutenicas de los primeros antildeos del descubrimiento y conquista Algunos estudios relativamente recientes surgidos por el intereacutes general que suscita todo lo concerniente a la mujer han ayudado a considerar nuevas perspectivas La eru-dicioacuten moderna estaacute poniendo en tela de jucio los estereotipos tradicionales en cuanto a la pasividad y relevancia femeninas asiacute como al tradicional misogenismo que se atri-buye a la eacutepoca medieval Cada vez estaacute maacutes claro que la existencia de estas mujeres variaba considerablemente seguacuten la eacutepoca posicioacuten social o situacioacuten geograacutefica por lo que hacer valoraciones categoacutericas sobre laquola situacioacuten de la mujerraquo puede llevar a graves equivocaciones (Dillard 9) Es fundamental para comprender a la mujer espa-ntildeola que pasoacute al Nuevo Mundo tener en cuenta las enormes diferencias de todo tipo que existieron en la sociedad castellana y novomundista Un pintoresco ejemplo es el de laquolas tapadasraquo una usanza de origen aacuterabe que se pondriacutea de moda en Castilla poco despueacutes de la toma de Granada por los Reyes Catoacutelicos y que despueacutes pasariacutea al Peruacute Esta tradicioacuten ha perdurado en algunos pueblos de Espantildea hasta relativamente poco tiempo pueblos como Mojaacutecar (Almeriacutea) y Vejer de la Frontera (Caacutediz) son ejemplo de esta costumbre tambieacuten conocida como el de las laquocobijaacutesraquo

Tras la caiacuteda del reino musulmaacuten de Granada en 1492 la corona espa-ntildeola prohibioacute a las mujeres aacuterabes de Andaluciacutea vestir los velos islaacutemi-cos que cubriacutean sus rostros y ocultaban su identidad No era faacutecil des-arraigar esta costumbre tan ancestral y secular y el emperador Carlos asiacute como su hijo el rey Felipe II tuvieron que repetir la prohibicioacuten Cuando finalmente las moras fueron obligadas a abandonar sus velos y a adoptar el chal castellano comenzaron a utilizar la nueva prenda para cubrir sus rostros dejando al descubierto soacutelo uno de los ojos Esta nueva moda en el uso del chal tradicional nos asegura leoacuten Pi-nelo era extremadamente graciosa sensual y atractiva a causa de la belleza exoacutetica de los ojos de las moras Las mujeres cristianas de Granada Coacuterdoba y Sevilla imitaron pronto la nueva moda de llevar el chal y asiacute nacioacute la laquotapadaraquo hispana Desde Sevilla la nueva moda

150 JUAN FRANCISCO MAURA

fue a las colonias de ultramar y tomoacute raices especialmente en el Peruacute (Martiacuten 317-18)

En un reciente estudio sobre la educacioacuten de la mujer en la Ameacuterica virreinal apare-cen algunos ejemplos significativos de mujeres espantildeolas que consagraron gran parte de sus vidas a la tarea docente Dentro del proceso educativo de las espantildeolas que fueron a las Indias destaca el papel de dontildea Catalina de Bustamante Joseacute de Jesuacutes Vega y Ma-riacutea Luisa Caacuterdenas de Vega dicen en su obra Ameacuterica Virreinal La Educacioacuten de la mujer que esta mujer pocos antildeos despueacutes del descubrimiento del Nuevo Mundo se dedicoacute a trabajar en favor de los indios aunque por desgracia su nombre y sus hechos en la labor docente hayan sido ignorados por los historiadores modernos (Vega 12-13)

Son varias las veces que se nombra a Catalina de Bustamante en el citado estudio y varias las fuentes antiguas en que se recoge la presencia de tan distinguida laquomatrona muy honrada y de buen ejemploraquo de la que ya hablaba Zumaacuterraga y sobre la que se hizo un informe enviado a Carlos V describiendo sus actividades en la Nueva Espantildea firmado por cuatro de los misioneros maacutes conocidos de Meacutexico

El informe dice que los franciscanos de Texcoco acababan de cons-truir un nuevo monasterio y cedido el antiguo A una honrada y honesta y muy virtuosa matrona que se dice Catalina de Bustamante para que ende instruyese a las hijas de los sentildeores de la comarcala cual con el favor de Dios y limosnas que don Hernando [Corteacutes] les haciacutea para su sustentacioacuten [teniacutea en esa casa-hogar] hasta trescientas mujeres antes maacutes que menos (Vega 14)

Estas laquocasas-hogarraquo no estaban regentadas necesariamente por monjas sino por lo que llamaban laquobeatasraquo mujeres que sin estar estar sujetas a la autoridad eclesiaacutestica se dedicaban a un laquolucro honestoraquo Llamadas tambieacuten laquobeateriosraquo eran diferentes a los conventos de monjas y constituiacutean las primeras escuelas de la mujer en la Nueva Espa-ntildea (Vega 20-21) Fue gracias al ejemplo de mujeres como Catalina de Bustamante que dedicaron sus vidas a la educacioacuten de los indiacutegenas que existiesen otras continuando su ejemplo Motoliniacutea dice claramente que laquode ese primer encerramiento (el de Texcoco regentado por Catalina) salieron otras honestas y muy virtuosas duentildeas que ensentildeaban a las maacutes menudasraquo (Vega 23)

Pero dontildea Catalina de Bustamante pese a ser una singular mujer y la iniciadora de la educacioacuten de la mujer en Meacutexico no fue un caso aislado corresponde maacutes bien a un patroacuten al que se ajustaron muchas de las pioneras de la Nueva Espantildea que sembraron instituciones de educacioacuten de la mujer En 1530 unos antildeos maacutes tarde aparecioacute una de las grandes protectoras de la instruccioacuten femenina en Ameacuterica La emperatriz Isabel de Portugal (Vega 24)

Desde comienzos de la conquista fueron varios los centros docentes regentados por mujeres en los que la ensentildeanza no estaba impartida por monjas Una de las institucio-nes maacutes sobresalientes del sistema educativo fue el Colegio de Nintildeas que se establecioacute en la ciudad de Meacutexico a principios del siglo XVI con maestras que no eran monjas Estas seglares conocidas comunmente como laquomigasraquo eran las descendientes de las antiguas beatas Su ubicacioacuten permanente fue determinada en 1548 lugar que serviriacutea de escue-la ininterrumpidamente hasta 1862 cuando el edificio fue convertido en bodega (Vega 60) No se debe perder de vista que no soacutelo por el hecho de llevar una vida secular se

151ESPANtildeOLAS DE ULTRAMAR EN LA HISTORIA Y EN LA LITERATURA

gozaba de maacutes privilegios Era maacutes bien al contrario En las carreteras las mujeres segla-res no inspiraban el mismo respeto que las monjas que ademaacutes teniacutean contacto cons-tante con personas de los dos sexos no pertenecientes a la Iglesia (Arenal 297) Ademaacutes dentro de las murallas del convento desapareciacutean muchas de las barreras sociales que limitaban a la mujer de esta eacutepoca

La presencia femenina y la monarquiacutea

Pues iquestcoacutemo sabes tuacute preguntoacute don Quijote que los grandes llevan detraacutes de siacute a sus caballerizos Yo seacute lo direacute respondioacute Sancho Los antildeos pasados es-tuve un mes en la corte y alliacute vi que paseaacutendose un se-ntildeor muy pequentildeo que deciacutean que era muy grande un hombre le seguiacutea a caballo a todas las vueltas que daba que no pareciacutea que era su rabo Pregunteacute que coacutemo aquel hombre no se juntaba con el otro sino que siempre anda-ba tras deacutel Respondieacuterome que era su caballerizo y que era uso de grandes llevar tras siacute a los tales Desde enton-ces lo seacute tan bien que nunca se me ha olvidado (Cervan-tes Don Quijote)

Los monarcas espantildeoles fueron conscientes de que sin la presencia femenina difiacute-cilmente se podriacutea solidificar una conquista a todos los niveles La mayor parte de los virreyes y altos cargos trajeron a sus mujeres con ellos y en las ciudades principales de Hispano-Ameacuterica como la ciudad de Meacutexico Guatemala Lima o Potosiacute habiacutea mujeres que disfrutaban de una esmerada educacioacuten (gramaacutetica latiacuten poesiacutea historia muacutesica) Esto dariacutea origen a una elegante y hasta cierto punto sofisticada sociedad en la que las mujeres tomaron parte en asuntos maacutes importantes que los que sus homoacutelogas toma-ran en las colonias portuguesas laquoThere were brilliant vice-regal courts at Mexico City and Lima far exceeding anything that could be found in Portuguese or English America during the seventeenth centuryraquo (Boxer 39) Las estadiacutesticas con las que contamos hoy no soacutelo demuestran que las mujeres llegaron al Nuevo Mundo en respetables porcen-tajes sino que ademaacutes tuvieron una participacioacuten activa llegando a intervenir en algu-nos casos en las liacuteneas de vanguardia Resulta difiacutecil aproximarse al estado de aacutenimo de aquellas mujeres que vivieron en eacutepocas tan lejanas Para ello es necesario indagar en los documentos de la eacutepoca para lograr rescatar del pasado todos esos tesoros de la historia muchas veces tergiversados y manipulados con el fin de que sirvan a propoacutesi-tos actuales Es en los viejos manuscritos donde queda testimoniada su presencia tan rica en dolores tragedias y por queacute no en amores Fue la llegada de estas mujeres una brisa de esperanza y de ilusioacuten para aquellos que ya estaban en las tierras de ultramar y

152 JUAN FRANCISCO MAURA

veiacutean venir de su propia tierra aquello que maacutes antildeoraban amantes madres hermanas Un haacutelito de vida y poesiacutea que suavizaba las costumbres de estos rudos y romaacutenticos pioneros laquoporque para ser hombres de tales empresas algo de romaacutentico debioacute de existir en ellos y que es tan propio del espantildeol y abandonariacutean en brazos tan gentiles sus bruscos modales que habiacutean adquirido en aacutespero contacto en selvas y montantildeasraquo (Villafantildee 125)

Hoy sabemos que en la normativa oficial de la Espantildea del siglo XVI y XVII se favoreciacutea el paso de mujeres al Nuevo Mundo Afirmar lo contrario no solamente es falso sino que implica un desconocimiento total de los primeros dos siglos de la colonizacioacuten espantildeola La presencia de estas mujeres espantildeolas fue efectiva laquolas disposiciones al respecto demuestran claramente que se teniacutea especial intereacutes en su arraigo y que se tra-taba de defender su posicioacuten de mujeres casadas con conquistadores y colonizadoresraquo (Villafantildee 126) Los monarcas comprendiacutean que era praacutecticamente imposible que los hombres viviesen sin mujeres y que de ser asiacute era de esperar que se cometiesen abusos con las indias lo que incidiriacutea en la moral social y en el buen gobierno de la colonia Ademaacutes sin un asentamiento definitivo con hogares y familias difiacutecilmente se podriacutea llevar a cabo una presencia permanente en las nuevas colonias (Orsquo Sullivan-Beare 45)

Empezando por los Reyes Catoacutelicos la preocupacioacuten de que en las colonias se esta-bleciesen nuacutecleos que tuviesen como base la familia cristiana fue clara Las capitulacio-nes que a este efecto se hicieron entre los conquistadores y la Corona fueron nume-rosas La efectuada entre Rodrigo de Baacutestidas y Carlos V puede ser un buen ejemplo Fechada en Valladolid el 6 de noviembre de 1524 muestra el propoacutesito de Baacutestidas de establecer una colonia permanente en la desembocadura del riacuteo Magdalena en el terri-torio que hoy vendriacutea a corresponder a Colombia El documento firmado por el Empe-rador comienza asiacute

El Rey Por cuanto por parte de vos Rodrigo de Baacutestidas vecino de la ciudad de Santo Domingo de la Isla Espantildeola Me fueacute fecha relacioacuten que por servicio de la Catholica Reyna Mi Sentildeora e Nuestro os ofre-ceacuteis de poblar e poblariades la provincia e puerto de Santa Marta que en Castilla de Oro llamada la Tierra Firme e que la poblariades dentro de dos antildeos siguientes haciendo en ella un pueblo en que no menos haya en eacutel al presente cincuenta vezinos que los quince de ellos sean casados y tengan consigo a sus mujeres y que lo teniades fecho dentro de dos antildeos y de hoy en adelante lo maacutes que fuese posible asiacute de cris-tianos espantildeoles como de indios (Restrepo 1 30)

De igual manera el priacutencipe Felipe (futuro Felipe II) en las capitulaciones establecidas en 1547 con Juan de Sanabria para que eacuteste fuese como gobernador y capitaacuten general de la dicha provincia escribe lo siguiente laquoPrimeramente que seais obligado e os obligeis a llevar destos Reynos de Castilla a la dicha provincia del Rio de la Plata cien casados con sus mujeres e hijos para poblar la dicha provincia y con ellos llevareis a vuestra muger e hijos (CDI de Ameacuterica y Oceaniacutea 23 119)

En numerosas ocasiones se pone de manifiesto el apoyo de la monarquiacutea a la emigra-cioacuten femenina tantas que difiacutecilmente se podriacutean enumerar todos los casos Lo cierto es que la legislatura vigente favoreciacutea la emigracioacuten y traslado de mujeres con toda una se-

153ESPANtildeOLAS DE ULTRAMAR EN LA HISTORIA Y EN LA LITERATURA

rie de alicientes137 sobre todo si eacutestas estaban casadas pasaje para llevar a las familias franquicia de derecho para los artiacuteculos que portasen consigo favoritismo en cargos destinos y contrataciones a aquellos que pasasen con sus mujeres incluyendo ademaacutes de los castellanos y leoneses a suacutebditos de otras partes de la corona incluso genoveses y portugueses si estos veniacutean acompantildeados de sus consortes (Fernaacutendez Duro 15-16)

Incluso se llegoacute a imponer penas a aquellos hombres casados que no llevasen a sus mujeres con ellos a Indias en el teacutermino de un antildeo El mismo emperador en una ceacutedula otorgada al virrey de la Nueva Espantildea le recomendaba que laquoprocurase persuadir a ca-sarse a los solteros que estuviesen en edad y situacioacuten de hacerloraquo prometieacutendoles que al efectuar el matrimonio seriacutean preferidos en el reparto de indios En la isla de San Juan de Puerto Rico los cargos oficiales y oficios puacuteblicos debiacutean de ser desempentildeados por los casados en primer lugar En Meacutexico ocurrioacute lo mismo con los cargos de corregido-res (Konetzke laquoemigracioacutenraquo 140-41) Felipe II al igual que sus antecesores y sucesores reiteraraacute y justificaraacute los beneficios de los que seraacuten acreedores aquellos que tengan allaacute a sus mujeres laquoque los que han servido en los descubrimientos de las dichas Indias y tambieacuten los que ayudan a la poblacioacuten dellas que tienen allaacute sus mugeres sean preferi-dos en los aprouechamientos qualesquierraquo mandando que despueacutes de los conquistado-res se tuviera en cuenta para la laquoprovisioacuten de los corregimientosraquo a los colonos casados siempre que estuvieran capacitados para dichos cargos (Konetzke laquoemigracioacutenraquo 141)

Las disposiciones en favor del matrimonio son claras ya sea por medio de un favo-ritismo manifiesto como en los casos antes citados o mediante medidas de cohercioacuten para que esta poliacutetica se llevase a cabo Don Sebastiaacuten Ramiacuterez de Fuenleal obispo de Santo Domingo y presidente de la Audiencia de Meacutexico propuso que a aquellos enco-menderos que no estuviesen casados y que no hubiesen tomado parte en la conquista se les quitase los indios concedidos con la obligacioacuten de devolveacuterselos si en el plazo de un antildeo habiacutean contraiacutedo matrimonio (Konetzke laquoemigracioacutenraquo 142-43) Por supuesto hubo excepciones a estas reglas En algunos casos ni la mujer teniacutea especial intereacutes en vivir junto con su marido en las Ameacutericas ni el marido queriacutea ir a buscar a su mujer pasado el plazo de un antildeo En el presente documento y de forma excepcional las auto-ridades reales protegen a los conyuges para que puedan seguir viviendo separados en continentes diferentes

Nuestras justicias de la ysla de Cubagua e otras qualesquier de las nuestras Yndias yslas e tierra firme del mar oceacuteano e a cada uno e qualquier de vos a quieacuten esta mi ceacutedula fuese mostrada por parte de Alonso de Tapia nuestro veedor de la provincia de Paria me ha sido hecha relacioacuten que ha mucho tiempo que reside en esas partes donde nos ha servido en lo que se ha ofrecido e que agora vos otros le apre-miaacuteis a que venga o embiacutee a estos Reinos por su muger lo cual no puede al presente hazer a causa de no ter posibilidad para ello a mi me ha suplicado vos mandase que no le compeliacuteesedes ny apremiaacutesedes a que viniese o enviase por la dicha su muger y dieacutesedes por libres los fiadores que tenyades para que dentro de un antildeo embiariacutea o verniacutea por

137 Reales Ceacutedulas de los antildeos 1502 y 1503 Academia de la Historia Coleccioacuten Muntildeoz tomo 75 fols 209 y 220 citado por Fernaacutendez Duro 15

154 JUAN FRANCISCO MAURA

ella o como la mi merced fuese lo cual visto por los de nuestro consejo juntamente con una peticioacuten presentada por dontildea Mariacutea Gudiel muger del dicho Alonso de Tapia por la cual nos suplica lo mismo que acor-dado que debiacutea mandar esta mi ceacutedula para vos por la qual vos mando que no compelaacuteis ni apremieacuteis al dicho Alonso de Tapia a que venga ni enviacutee a estos reinos por la dicha su muger si no fuere a que la pro-vea de lo que fuere necesario para su mantenimiento y deys por libres quales quier fianzas que sobre ello haya dado e no fagades ende al por alguna manera Firmado en la villa de Valladolid a VII diacuteas del mes de febrero de mil e quinientos e treinta y siete antildeos yo el licenciado Con-de de Samano y sentildealada del cardenal Beltraacuten y Carbajal [Aparte en letra pequentildea] Este diacutea se despachoacute una provisioacuten por la cuaacutel su Mag hizo merced a Alonso de Tapia de la veedoriacutea de la provincia de Paria por muerte de Garciacutea de Aguilar con las clausulas ordinarias y con el mismo salario que teniacutea Aguilar Firmado del emperador y de Beltraacuten y Bernal y Velaacutezquez El Rey (Registro de disposiciones Riacuteo Marantildeoacuten AGI Indiferente General Legajo 416 libro 2 Fols 94v y 95r)

El punto maacutes interesante a destacar de todas estas disposiciones oficiales en cuanto a la emigracioacuten femenina al Nuevo Mundo no es otro que la libertad que se da a la mujer de decidir si quiere o no casada o sin casar trasladarse al nuevo continente no como una imposicioacuten sino como un precepto laquoel espiacuteritu de las disposiciones en el sentido de asegurar la vida marital de los casados significa que la mujer que su marido invita a pa-sar a las Indias puede negarseraquo (Villafantildee 127) Habriacutea que ver las opciones laquorealesraquo ade-maacutes de las legales y econoacutemicas que le quedaban a la mujer si tomaba esta decisioacuten

El saber la libertad de eleccioacuten que estas mujeres teniacutean de antemano antes de aden-trarse en las interminables penalidades y aventuras que los viajes de la navegacioacuten tran-soceaacutenica suponiacutean hace que sus hechos y esfuerzos cobren auacuten maacutes relieve En nume-rosas ocasiones estas mujeres cruzaron el oceacuteano una y maacutes veces sin otro motivo que el de defender los derechos e intereses de los suyos Lo que resulta maacutes valioso de todo esto es que lo hicieran por propia iniciativa arriesgando sus vidas para que se hiciese justicia y para que no les faltase lo necesario a aquellos que estaban en la otra orilla Las autoridades vigentes conocedoras de los vaciacuteos legales existentes en las nuevas colo-nias se apresuraron a poner en vigor aquellas normas que redundaran en el beneficio de los menos favorecidos por las circunstancias La institucioacuten del matrimonio cuya trans-cendencia es fundamental en la vida juriacutedica y social de la mujer tuvo que ser legislada en Ameacuterica con una serie de nuevas disposiciones agregados modificaciones y aclara-ciones Asiacute pues la legislacioacuten de base espantildeola tuvo que sufrir en tierras americanas esta serie de cambios por motivos poliacuteticos y sociales (Villafantildee 126)

Para hacer un sumario de lo dispuesto hasta el siglo XVI en cuanto a la legislacioacuten de las mujeres que teniacutean familia o intereses en Indias merece la pena mencionar que existieron una serie de disposiciones que protegiacutean a las mujeres para que eacutestas no se viesen abandonadas por sus maridos En un epiacutegrafe de la Recopilacioacuten de 1680 (libro VII tiacutetulo 3) se deja ver claramente la preocupacioacuten de las autoridades en este asunto laquoDe los casados en Espantildea e Indias que estaacuten ausentes de sus mujeres y esposasraquo (Vi-llafantildee 126-27)

155ESPANtildeOLAS DE ULTRAMAR EN LA HISTORIA Y EN LA LITERATURA

La lista de disposiciones se hace interminable En los reinados de Fernando el Catoacute-lico Carlos V Felipe II Felipe III o incluso Carlos II la insistencia es constante La ra-zoacuten de esta insistencia seriacutea bastante obvia dado que con un oceacuteano por medio seriacutean muchos los que se aprovechasen de llevar una doble vida marital sin el estricto control y vigilancia de sus mujeres que se encontraban en la peniacutensula La ley XXVII libro IX tiacutetulo XXVI determina laquoDeclaramos por personas prohibidas para embarcarse y pasar a las Indias todos los casados y desposados en estos reinos lsquosino llevaren con ellos sus mujeresrsquo aunque sean virreyes oidores gobernadores o nos fuesen a servir en cual-quier cargo y oficios de Guerra Justicia y Hacienda porque es nuestra voluntad que todos los susodichos lleven a sus mujeresraquo (Villafantildee 127) laquoLos eclesiaacutesticos eran los en-cargados de dar cuenta a los tribunales competentes de aquellos que estando casados permaneciacutean en Indias sin sus mujeres Son reiteradas las disposiciones de Fernando el Catoacutelico en este sentidoraquo138 En 1514 el rey don Fernando ordena en una provisioacuten para la isla Espantildeola laquodoy licencia eacute facultad aacute cualquier persona naturales de estos Reynos para libremente se puedan casar con mujeres naturales de esa dicha ysla sin tener que incurrir por ello en pena algunaraquo (Villafantildee 129)

No se debe olvidar tampoco a aquellas mujeres que decidieron pasar a las laquonuevas tierrasraquo solteras Estas mujeres tambieacuten tuvieron un papel importante en el desarrollo de las nuevas colonias Los organismos espantildeoles del momento como los mandatarios indianos y todos los cronistas no dejaron pasar desapercibida la importancia social de estas mujeres en la poliacutetica de poblamiento laquo[E]s cierto que los pueblos de Indias nuevamente poblados no se tienen por fijos o estables ni permanentes hasta tanto que mujeres espantildeolas entren en ellos y los encomenderos y conquistadores se casen por muchas causas y respetos buenos y saludables que para ello hayraquo (Villafantildee 126-27)

Si la intencioacuten era la de una presencia permanente en las tierras americanas la mujer soltera que pasase a ellas siempre seriacutea un motivo maacutes para el colono o conquistador de continuar en el mismo suelo Se podriacutea empezar una familia si asiacute se quisiese sin tener que pensar en volver a la metroacutepoli ya fuese a disfrutar de los bienes adquiridos o a laquobuscarraquo una esposa El problema aparecioacute cuando se produjo un exceso de mujeres solteras lo que de alguna manera alteroacute la estructura social existente ya que no habiacutea muchas opciones para ellas aparte del matrimonio o el convento

En consideracioacuten a que la experiencia habiacutea demostrado que un exce-sivo nuacutemero de mujeres ejerciacutea perniciosa influencia sobre la moral y las costumbres se suplicaba al rey no otorgase a aquellas tantas auto-rizaciones para emigrar al Peruacute La ciudad de la Plata fundada en 1538 emite en 1577 un informe en el que se expone la urgente necesidad de que se funde un convento de monjas pues en el territorio de las Au-diencias de Los Charcas existiacutea un gran nuacutemero de muchachas que no pudieacutendose casar se hallaban en gran peligro de perderse (Konetzke laquoemigracioacutenraquo 149)

138 Solorzano Pereira Juan de Libro Primero de la Recopilacioacuten de las Ceacutedulas Reales Cartas y Provisiones y Or-denanzas Reales Noticia preliminar de Ricardo Levenne Universidad de Buenos Aires Facultad de Derecho Y Ciencias Sociales Pub del Instituto de Historia del Derecho Argentino Coleccioacuten de Textos y Documentos para la Historia del Derecho Argentino t V Buenos Aires Imp de la Universidad de Buenos Aires 1945 (Li-bro I Ley 10 laquoQue los Espantildeoles puedan casar con Indias y al contrario a su voluntadraquo t2 p 138 citado en Villafantildee 129

156 JUAN FRANCISCO MAURA

Entristece ver coacutemo se manejan las cifras de estas mujeres como si de ganado o de bienes suntuarios se tratase Por otra parte existieron irregularidades como la de pobla-doras espantildeolas que vivieron amancebadas con hombres que ya estaban casados en la peniacutensula Normalmente esto ocurriacutea cuando la estancia del conquistador se prolonga-ba maacutes de lo debido en lugares donde habiacutea pocas espantildeolas Muchas veces nacieron hijos de estas uniones que hicieron auacuten maacutes difiacutecil la situacioacuten para las mujeres que esperaban en Espantildea a un marido que ya no teniacutea ningunas intenciones de volver En los juicios de residencia los documentos acostumbran a citar estos casos ya que era parte de su obligacioacuten castigar las irregularidades extramatrimoniales y salvaguardar las buenas costumbres familiares que con tanto intereacutes se deseaba mantener laquoUn ejemplo nos lo da la isla de Cuba donde en 1532 viven con hombres casados Olalla Hernaacuten-dez Santillana Aranda lsquola Cordobesarsquo Catalina de Leoacuten Catalina Saacutenchez Francisca Hernaacutendez Mayor de Azebedo Juana de Valeros y lsquouna mujer que estaba en casa de Ayalarsquoraquo (Borges 416)

Estos casos no fueron aislados y mucho menos en Cuba centro neuraacutelgico de todo el movimiento de ida y vuelta entre la metroacutepoli y el Nuevo Mundo Estas ocho acusa-ciones por lo tanto no tienen porqueacute considerarse extraordinarias y menos en el lugar maacutes cosmopolita de las Indias en esos momentos al que llegaban flotas a cada momen-to Al parecer existieron casos parecidos en el Riacuteo de la Plata Peruacute y Nueva Espantildea (Ratcliffe 347) El margen legal para que estas mujeres viviesen como quisiesen estuvo limitado por una moral que veiacutea uacutenicamente en el matrimonio o el convento una salida laquovaacutelidaraquo para que fueran aceptadas socialmente Los hombres en iguales circunstan-cias fueron juzgados por una laquomoralraquo mucho maacutes permisiva

La mujer y el cuerpo eclesiaacutestico

Pues iquestquieacuten diablos os traiacutedo aquiacute dijo don Quijote siendo hombre de la iglesia iquestQuieacuten sentildeor replicoacute el caiacutedo laquomi desventuraraquo Pues otra mayor os amenaza dijo don Quijote sino me satisfaceacuteis a todo cuanto primero os pregunteacute (Cervantes Don Quijote )

Otro factor a tener en cuenta en un anaacutelisis sobre la presencia de la mujer en el Nuevo Mundo es el que tiene que ver con la institucioacuten maacutes importante de las que llegaron desde Europa la iglesia catoacutelica Sin aacutenimo de criticar a tan compleja institucioacuten res-ponsable de gran parte de los aconteceres en el Nuevo Mundo vale la pena analizar algunas singularidades Muchos de sus miembros fueron grandes ejemplos de valor e inteligencia a la hora de tratar los maacutes variados y escabrosos asuntos con los que se encontraron los cristianos en la otra orilla durante este periacuteodo Se debe resaltar tam-

157ESPANtildeOLAS DE ULTRAMAR EN LA HISTORIA Y EN LA LITERATURA

bieacuten su caraacutecter medieval en la manera de hacer apostolado y de entender y tratar a los potenciales cristianos Si se tienen en cuenta los privilegios y prerrogativas que algunas de las altas jerarquiacuteas eclesiaacutesticas tuvieron no seriacutea superfluo estimar que un respeta-ble porcentaje de la poblacioacuten de origen laquodudosoraquo muy bien podiacutea venir de la misma iglesia Fueron muchas las viacutectimas y muchas las familias divididas por un padre laquoinvi-sibleraquo Gran parte de los hijos o laquosobrinosraquo de estos sacerdotes pasaron a ocupar cargos similares incluyendo los privilegios que estos cargos llevaban consigo como si se trata-se de cualquier otro oficio gremial transmitido generacionalmente regla tan comuacuten en la Europa medieval Todaviacutea a finales del siglo XIII en Espantildea los derechos de los hijos y nietos de los sacerdotes estaban protegidos por la ley sin que hubiesen podido ser erradicados por las reformas gregorianas (Ratcliffe 347)139

Las letras espantildeolas ya se haciacutean eco de estos lances amorosos entre representantes de la Iglesia y ciertas damas del lugar desde los tiempos del poeta riojano Gonzalo de Berceo En su obra maacutes conocida Los milagros de Nuestra Sentildeora Berceo describe con un realismo ingenuo y sencillo relatos de humor y de humanismo sobre aquellos hombres de carne y hueso que eran perdonados por la intercesioacuten de la Virgen Mariacutea Juan Ruiz por su lado haraacute de su Libro de buen amor la obra maacutes representativa en este sentido Seriacutea prolijo recordar la actuacioacuten de la Iglesia durante diversos periacuteodos de la Edad Media no soacutelo en Espantildea sino en toda Europa En la Espantildea musulmana del siglo XII concretamente en Sevilla el comportamiento de los representantes de la iglesia cristia-na (mozaacuterabe) en territorio islaacutemico es duramente criticado por el sevillano Ibn Abdun Este precioso documento muestra el estricto control y falta de confianza que existiacutea sobre la mujer prohibieacutendolas que entrasen en las laquoabominablesraquo iglesias cristianas

porque los cleacuterigos [cristianos] son libertinos fornicadores y sodomi-tas Asimismo debe prohibirse a las mujeres francas que entren en la iglesia maacutes que en diacuteas de funcioacuten o fiesta porque alliacute comen beben y fornican con los cleacuterigos y no hay uno de ellos que no tenga dos o maacutes de estas mujeres con que acostarse Han tomado esta costumbre por haber declarado iliacutecito lo liacutecito y viceversa Convendriacutea pues mandar a los cleacuterigos que se casasen como ocurre en Oriente y que si quie-ren lo hagan (Leacutevi-Provenccedilal 150)

Pese a existir una convivencia paciacutefica durante gran parte de la Edad Media entre los tres credos monoteiacutestas de Espantildea (cristianos musulmanes y judiacuteos) esto no suponiacutea que no existiese desprecio y desconfianza entre estos grupos religiosos Dice Abdun resaltando el peligro que suponiacutea que una mujer entrase en casa de un cleacuterigo cristiano de vida ceacutelibe

No debe tolerarse que haya mujer sea vieja o no en casa de un cleacuterigo mientras eacuteste rehuacutese casarse Obliacutegueseles ademaacutes a circuncidarse co-mo les obligoacute al-Mutadid pues si a lo que dicen siguen el ejemplo de Jesuacutes (iexclDios les bendiga y salve) Jesuacutes se circuncidoacute y precisamente ellos que han abandonado esta praacutectica tienen una fiesta que celebran solemnemente el diacutea de su circuncisioacuten (Leacutevi-Provenccedilal 150-151)

139 Valdriacutea la pena ver si han cambiado mucho las cosas desde hace quinientos antildeos a esta parte o si in-cluso la iglesia moderna ha retrocedido en tolerancia en cuanto a las relaciones sexuales de los representantes de la Iglesia

158 JUAN FRANCISCO MAURA

El historiador argentino Germaacuten Arciniegas recoge un pasaje ilustrativo de lo men-cionado anteriormente pero trasladado al ambiente de la colonia diciendo que incluso en poblaciones pequentildeas como Santa Fe con poco maacutes de un convento y una ermita la fragilidad de la carne enredaba a frailes soldados y virreyes por igual laquoEl buen So-liacutes que murioacute en olor de santidad con la cabeza reclinada sobre un par de ladrillos y en saya de franciscano cruzaba en las noches el solar de su palacio para ir a besar a la Marichuelaraquo (118-19)

Arciniegas recoge tambieacuten un suceso aparecido en el diario de Lima en 1667 que no tuvo que ser extraordinario durante los primeros antildeos de la colonia laquoEl fraile carmelita mdashGrande hereje y siendo sacerdote deciacutea misa gran perro lujurioso deshonesto que relatando sus maldades dijo que en cierta ciudad habiacutea conocido carnalmente a maacutes de trescientas y sesenta mujeres y en un convento de monjas habiacutea cometido muchos sacrilegios Este lo trujeron preso de Buenos Aires por Chileraquo (119)

Las controversias de la iglesia moderna sobre las relaciones que los eclesiaacutesticos de-ben tener con el sexo femenino parece que no han encontrado todaviacutea respuesta Sigue existiendo miedo y recelo a que la mujer comparta no soacutelo poder en la jerarquiacutea de la iglesiacutea sino en la vida privada de los miembros de la institucioacuten En la Nueva Espantildea el primer obispo de Meacutexico Juan de Zumaacuterraga viendo en la mujer un ser de tentacioacuten irresistible prohibioacute terminantemente la presencia de eacutestas en su casa Ni siquiera para su limpieza y aseo El franciscano Juan de Torquemada se refiere a este comportamien-to como una de las virtudes del popular obispo

Fue este benditiacutesimo prelado muy amigo de la virtud y de virtuosos y aceacuterrimo reprehendedor de vicios y viciosos y tan enemigo de la ociosidad que no permitiriacutea que alguno de su casa estuviese ocioso fue amiciacutesimo de la limpieza por lo cual jamaacutes consintioacute que mujer alguna entrase en su casa aunque fuese necesaria al servicio de ella ni nunca consintioacute que por alguna ocasioacuten subiese mujer a lo alto y aposentos de ella antes lo teniacutea todo cerrado como un monasterio porque sabiacutea (como quien tambieacuten sabiacutea) que la ocasioacuten suele derribar los maacutes fuertes y robustos corazones (450 lib 20 cap 31)

No fueron uacutenicamente miembros de la iglesia catoacutelica los que valoraron la lucha con-tra la tentacioacuten siguiendo al pie de la letra el crudeliacutesimo refraacuten laquoentre santa y santo pared de cal y cantoraquo Se tienen algunas noticias de la vida social de los primeros tiem-pos de la colonia En estos documentos se puede observar coacutemo no distaban mucho las oacuterdenes que se dictaban en la metroacutepoli y las que se llevaban a cabo en la Nueva Espantildea La vida social tanto de damas como de algunos miembros de la iglesia de las colonias era maacutes laquorelajadaraquo de lo que las normas permitiacutean Gracias a la informacioacuten ofrecida por Manuel Romero de Terreros disponemos de los nombres de las primeras virreinas

Las esposas de los primeros cinco Virreyes Don Antonio de Mendoza Don Luis de Velasco Don Gastoacuten de Peralta Don Martiacuten Enriacutequez de Almanza y Don Lorenzo Suaacuterez de Mendoza Conde de la Coruntildea fueron respectivamente Dontildea Caterina de Vargas Dontildea Ana de Cas-tilla y Mendoza hija de Don Diego de Castilla Sentildeor de Gor y Caba-

159ESPANtildeOLAS DE ULTRAMAR EN LA HISTORIA Y EN LA LITERATURA

llerizo de Carlos V Dontildea Leonor de Vieo Dontildea Mariacutea Manrique hija del Marqueacutes de Aguilar y Dontildea Catalina de la Cerda hija del segundo Duque de Medinaceli (Romero 2)

Existen noticias concretas de la seacuteptima virreina de la Nueva Espantildea (1586) dontildea Blanca de Velasco marquesa de Villamanrique En ellas destaca lo anteriormente men-cionado sobre la falta de tolerancia existente en aquellos tiempos difiacutecilmente com-prensible si no fuera por fragmentos esporaacutedicos conservados sobre la vida colonial en la Nueva Espantildea En la siguiente Relacioacuten hecha por autores anoacutenimos sobre la visita que hizo Fray Alonso Ponce Comisario General de la Orden Seraacutefica a las provincias de la Nueva Espantildea se mencionan las eneacutergicas medidas que con los miembros de su orden en su opinioacuten de moral laquomuy relajadaraquo tomoacute este religioso Tambieacuten aparecen mencionadas sus relaciones con la Virreina

Captoacutese ademaacutes la enemistad del gobernante y de la Virreina Dontildea Blanca de Velasco hija del cuarto Conde de Nieva sentildeora seguacuten pare-ce de conducta ligera y caraacutecter maacutes que dominante laquoPor este mismo tiempo (septiembre de 1586) fueron el Virey y la Vireyna a holgarse y recrearse en la cibdad de Xochimilco Posoacute con toda su casa dentro de nuestro convento en un dormitorio deacutel y detuacutevose alliacute siete u ocho diacuteas en que los indios les hicieron grandes fiestas aunque les costaron caras porque en una dellas murieron dos o tres dellos con un tiro que se disparoacute y reventoacute y al principal indio de aquella cibdad hirieron muy malraquo (Romero 3-4)

A pesar del riacutegido control eclesiaacutestico y civil que habiacutea en la Nueva Espantildea existieron tambieacuten pareacutentesis en los que incluso miembros de la iglesia y mujeres mdashhumanos al fin y al cabomdash pudieron disfrutar de algunos momentos de regocijo y alegriacutea Con-tinuando con la cita anterior el mismo autor se queja del laquoexcesoraquo de libertad en los frailes que se suponiacutea que teniacutean que profesar una extremada pobreza y no digamos castidad En primer lugar se describen pormenorizadamente la abundancia en el tipo y cantidad de comida de toda clase dulces y vino que se consumieron con largueza y generosidad durante aquellas fiestas Pero lo que maacutes indigna al autor (o autores) fue que llegasen a entrar mujeres en el convento

y aunque todo esto es malo delante de Dios y delante de los hom-bres lo que maacutes mal parecioacute y de que todo el mundo tuvo que mur-murar fueacute la demasiada libertad rotura y disolucioacuten que hubo en en-trar y estar muy de propoacutesito mujeres no soacutelo la Vireyna y las suyas sino otras muchas dentro del dicho convento y andar por las celdas como si fuese cosa profana y como si no hubiera breve apostoacutelico que soacute graves penas y censuras prohibe estas entradas y como si a los frai-les no los comprendiera el dicho breve por admitirlas y no estuviera asiacute declarado y mandado por nuestros estatutos generales de Toledo (Romero 4-5)

La preocupacioacuten por las laquotentaciones de la carneraquo fuera del matrimonio siempre es-tuvo en la mente de los religiosos espantildeoles asiacute como de otras nacionalidades y reli-

160 JUAN FRANCISCO MAURA

giones que intentaban vanamente erradicar algo tan intriacutenseco al ser humano como a cualquier otra especie animal Esta preocupacioacuten se acentuoacute mucho maacutes en el Nuevo Mundo donde muchas sociedades tribales no veiacutean a la mujer como parte integrante de su propiedad privada La razoacuten es obviamente socioloacutegica y ha existido desde el principio de los tiempos en las civilizaciones maacutes primitivas laquoNo desearaacutes a la mujer del proacutejimoraquo El quebrantar este precepto equivaldriacutea a desestabilizar desde su base a la sociedad judeo-cristiana fundamentada en la familia Las penas aplicadas en estas transgresiones seraacuten lo suficientemente severas como para marginar socialmente mdashen el mejor de los casosmdash a aquellos que las pongan en praacutectica Siendo la mujer la encar-gada por la naturaleza de trasmitir la descendencia de la especie su libertad sexual se veraacute limitada por el peligro de quedar embarazada cada vez que ignore tal elemental precepto140

Primeras escritoras del Nuevo Mundo

Contra cuerdos y contra locos estaacute obligado cualquier caballero andante a volver por la honra de las mujeres cualesquiera que sean Cuanto maacutes por las reinas de tan alta guisa y pro como fue la reina Madaacutesima a quien yo tengo particular aficioacuten por sus buenas partes porque fuera de haber sido fermosa ademaacutes fue muy prudente y muy sufrida en sus calamidades que las tuvo muchas (Cervantes Don Quijote)

Fueron varias las escritoras que durante los siglos XVI y XVII tuvieron una relacioacuten di-recta o indirecta con el Nuevo Mundo Muchas de ellas eligieron la vida monaacutestica mdashen algunos casos como refugio huyendo de sus maridosmdash uacutenica salida en una estructura social en donde no eran muchas las opciones especialmente en una eacutepoca donde el fac-tor religioso pesaba casi tanto como el econoacutemico pero sobre todo para dedicarse a una vida espiritual difiacutecilmente alcanzable en otras circunstancias Mariloacute Vigil apunta que las monjas que lo eran por su propia voluntad ademaacutes de tener inquietudes religiosas tambieacuten las teniacutean intelectuales como es el caso de la escritora miacutestica espantildeola Santa Teresa de Jesuacutes (1515-1582) que ademaacutes de tener una de las vidas maacutes interesantes que se conozcan supo sacar tiempo para escribir las maacutes bellas manifestaciones de la poesiacutea liacuterica y sobre todo de la prosa castellana (Vigil 237-38) Cada una de estas mujeres de-dicadas a la vida literaria y espiritual de su tiempo se merece muchiacutesimo maacutes espacio del que se les pueda ofrecer en estas pocas liacuteneas No obstante con estas pasajeras men-

140 Aunque afortunadamente las cosas han cambiado para la mujer no se debe dejar de mencionar la can-tidad de abusos sexuales de la que es viacutectima en la sociedad moderna

161ESPANtildeOLAS DE ULTRAMAR EN LA HISTORIA Y EN LA LITERATURA

ciones se espera al menos incluirlas y poder despertar el suficiente intereacutes para que sus vidas y sus obras no sigan sumergidas en las simas del olvido Para que estas mujeres de la iglesia pudiesen satisfacer su curiosidad cognoscitiva era necesario romper todas aquellas barreras que supusiesen un estorbo o una restriccioacuten a la hora de investigar consultar o hablar con cualquier persona religiosa de cualquier orden o secular ya fue-se obispo o cleacuterigo Las posiciones intelectuales entre las diferentes oacuterdenes religiosas fueron muy dispares como bien es sabido No eran iguales los planteamientos teoloacute-gicos de los dominicos que los de los franciscanos o los de los carmelitas que los de los agustinos o jesuitas Era necesario por lo tanto tener acceso a estas fuentes de informa-cioacuten para poder constrastar las diferencias y hacer valoraciones propias (Vigil 237-38) El escritor espantildeol Caro Baroja destaca el caraacutecter enciclopeacutedico del catolicismo donde se han integrado corrientes y posturas muy dispares que a traveacutes del diaacutelogo daban cierto espacio al creyente con maacutes curiosidad intelectual para que este pudiese compa-rar y valorar las diferentes opciones que se le ofreciacutean (Vigil 237-38)

Varias de estas mujeres intelectuales fueron hijas de conquistadores que aunque na-cidas en suelo americano seguiacutean expresaacutendose en la lengua de sus padres con no me-nos fuerza que sus contemporaacuteneas peninsulares Es cierto que existieron numerosas escritoras en el Nuevo Mundo durante el siglo XVIII algunas dedicadas incluso al estudio de las matemaacuteticas como la mexicana Dontildea Francisca Gonzaga y Castillo Pero para limitar el presente trabajo a los siglos XVI y XVII uacutenicamente se incluiraacuten ejemplos de estos dos siglos

La peruana Josefa de Alarcoacuten publicoacute en 1648 unas liras dedicadas a las Exequias del Priacutencipe Baltasar Carlos

Cifro en capilla breveEl tribunal de la Magestad maacutes graveEn fe de lo que debeA Carlos que en dos mundos no cabe141

El caso de Sor Jeroacutenima de la Asuncioacuten es muy interesante una mujer que tuvo la oportunidad de viajar a Meacutexico y posteriormente a las Filipinas para cumplir con las mi-siones que le habiacutean sido encomendadas por su orden Nacida en Toledo en 1555 en el seno de una noble y acaudalada familia estuvo destinada a recorrer el mundo ofrecien-do sus servicios a todos los necesitados distinguieacutendose por su ardiente caridad laquovien-do que los galeotes eran tratados con dureza excesiva sobre todo cuando los llevaban de un pueblo a otro procuroacute aliviar las penas de aquellos desgraciados y lo consiguioacute en parteraquo (Serrano y Sanz 268 65) Hija del licenciado e ilustre jurista Pedro Garciacutea Yaacute-ntildeez y de dontildea Catalina de la Fuente ingresoacute contra su voluntad en el monasterio de las Clarisas de Santa Isabel de los Reyes (Toledo) el 5 de agosto de 1570 (Trevintildeo 46) hay que decir que eacutesta no seraacute la uacutenica voluntad contra la que tuvo que luchar

Sor Jeroacutenima se embarcoacute para Meacutexico y de alliacute partioacute hacia Manila junto con siete compantildeeras en el famoso laquoGaleoacuten de Manilaraquo que saliacutea anualmente del puerto mexi-cano de Acapulco Su viaje a las Filipinas duroacute un antildeo y tres meses desde su salida de Espantildea tiempo en el que demostroacute un gran valor y determinacioacuten por el soacutelo hecho de

141 Manuel Serrano y Sanz Apuntes para una biblioteca de escritoras espantildeolas desde el antildeo 1401 al 1833 vols 268 269 270 271 Biblioteca de Autores Espantildeoles (Madrid Atlas 1975) 268 19

162 JUAN FRANCISCO MAURA

embarcarse en tan precarias naves Fue la primera misionera de Oceaniacutea muriendo en Manila en 1621 Alliacute fundoacute el monasterio de Santa Clara que perviviriacutea hasta ser bom-bardeado en la Segunda Guerra Mundial (Trevintildeo 47) Escribioacute su Vida donde trata de la fundacioacuten del convento y de todas las tribulaciones mdashllegoacute a ser excomulgadamdash y satisfacciones que una vida dedicada a una causa justa proporciona Tambieacuten escribioacute una obra de caraacutecter filosoacutefico-teoloacutegico titulada Carta de marear en el mar del mundo nombre alegoacuterico que da cuenta de la enorme distancia recorrida a traveacutes del laquomar del espiacuterituraquo por sor Jeroacutenima He aquiacute algunos de sus versos de caraacutecter religioso

Vuestra soy para vos naciacuteiquestQueacute mandaacuteis hacer de miacute Inaccesible grandezaEterna Sabiduriacuteay bondad del alma miacuteaDios un ser poder y Altezamirad la suma pobrezade eacutesta que se ofrece aquiacuteiquestQueacute mandaacuteis hacer de miacute (Serrano y Sanz 268 66)

Ya en Meacutexico tenemos otro ejemplo de una mujer dedicada por completo a Dios y al estudio y composicioacuten de obras de caraacutecter teoloacutegico Dontildea Ana Mariacutea del Costa-do de Cristo nacida en la ciudad de Tlaxcala hacia el antildeo 1650 Tomoacute la orden de San Francisco para consagrarse a las labores de su orden y a la escritura Se dice que con los escritos de Dontildea Ana Mariacutea se podriacutean formar veinte tomos (Serrano y Sanz 268 282) Estas son algunas de sus obras Vida y muerte de Jesucristo Nuestro Sentildeor Vida del Seraacutefico Padre San Francisco de Asiacutes Vida de la iacutenclita Virgen Santa Clara Vida del sutiliacutesimo doctor Juan Duns Escoto

Pero no todas las monjas tuvieron vidas tan dedicadas al estudio y la oracioacuten Loacutegica-mente entre un nuacutemero tan grande de mujeres existioacute de todo y seriacutea un error pensar que todos los conventos femeninos estaban integrados por laquocaacutendidas palomasraquo Una monja en el siglo XVI y XVII teniacutea mucha maacutes fuerza que una mujer ordinaria ya que actuaban en grupo y la entrada a los recintos donde viviacutean estaba permitida solo a mu-jeres Esta situacioacuten las haciacutea mucho maacutes fuertes a todos los niveles que una mujer sola protegida uacutenicamente por su familia laquoLas monjas durante los siglos XVI y XVII lucharon por eludir la clausura y por zafarse del control que los frailes de las secciones masculi-nas de sus congregaciones ejerciacutean sobre ellasraquo (Vigil 230) Soacutelo un antildeo maacutes tarde que dontildea Ana Mariacutea del Costado de Cristo en 1651 y a 12 leguas de Meacutexico nacioacute la sin par Sor Juana Ineacutes de la Cruz hija de don Pedro Manuel de Asbaje natural de Vergara (Vizcaya) y de Dontildea Isabel Ramiacuterez de Santillana hija de espantildeoles (Serrano y Sanz 268 289) Por ser sin lugar a dudas la poeta maacutes importante de su tiempo y probable-mente la maacutes conocida del mundo hispano no profundizaremos en ella Su obra es un canto a la inteligencia y el exponente maacutes destacado de la literatura barroca americana tanto en prosa como en verso Destacareacute simplemente que Sor Juana Ineacutes pese a vivir en un sociedad donde no eran excesivas las libertades concedidas a las mujeres tuvo el caraacutecter y la determinacioacuten de dejarnos las maacutes bellas poesiacuteas amorosas que si bien estuvieron enmarcadas en un ambiente religioso como era de esperar por su condicioacuten

163ESPANtildeOLAS DE ULTRAMAR EN LA HISTORIA Y EN LA LITERATURA

pudieron transcender como unas de las maacutes bellas manifestaciones literarias que hoy en diacutea se conservan Fue su agudeza mental sensibilidad y cultura tal que no fueron suficientes los soacutelidos muros del convento para contener el genio de tan extraordinaria mujer Recordemos sus conocidiacutesimos versos en defensa de las mujeres

Hombres necios que acusaacuteisa la mujer sin razoacutensin ver que sois la ocasioacutende lo mismo que culpaacuteis142

Las metaacuteforas y la delicadeza que emplea en rebatir a su obispo en su laquoRespuesta a sor Filotea de la Cruzraquo no son solamente el epiacutetome del feminismo de su tiempo sino una de las maacutes brillantes manifestaciones del barroco hispano Poesiacutea teatro ensayo y un conocimiento extraordinario de las ciencias claacutesicas de su tiempo hacen de esta mujer un ejemplo extraordinario de las letras universales Ya son cientos los artiacuteculos y libros que se han escrito sobre Sor Juana y no dejan de aparecer tesis doctorales sobre los maacutes diversos temas conectados con la citada autora143 Como nos dice Stephanie Merrim en su documentada obra Early Modern Womenrsquos Writing and Sor Juana Ineacutes de la Cruz

She wrote and published on secular themes as atypical for a nun as human love Her remarkably extensive writings essayed and reenacted most of the (male) poetic dramatic theological and even philosophi-cal discourses of her times in the metropolis making her works a com-pendium of baroque culture in its diversity and syncretism Sor Juana self-creation as a learned women effectively toppled many of the walls in which she was materially enclosed and positioned her within the dynamic world of early modern European culture (xii)

No se debe dejar de mencionar a otras escritoras novohispanas de la eacutepoca que aun-que no fueron tan proliacuteficas y relevantes como Juana Ineacutes de la Cruz dejaron testimo-nio de algunos acontecimientos que tienen intereacutes socioloacutegico o testimonial Este es el caso de Dontildea Mariacutea Estrada Medinilla de igual nombre y apellido que la mujer que acompantildeoacute a las tropas de Corteacutes en su primera entrada a Meacutexico Natural de Meacutexico publicoacute toda su obra a mediados del siglo XVII concentraacutendose principalmente en la lle-gada del Marqueacutes de Villena virrey y capitaacuten general de la Nueva Espantildea a la ciudad de Meacutexico en el antildeo 1640 Escrita en octavas reales la obra trata de las fiestas de toros y cantildeas con que se obsequioacute al citado virrey Fue impresa en Meacutexico en 1641 (Serrano y Sanz 269 402)

Mucho maacutes importante para el presente libro es Dontildea Isabel de Guevara que escribioacute en 1556 la carta en que se expone la ayuda que ofrecieron las mujeres en el descubri-miento y conquista del Riacuteo de la Plata No cabe la menor duda de que esta carta es uno

142 Para una mejor comprensioacuten del caraacutecter de esta excepcional mujer veacutease entre los numeros trabajos publicados Fredo Arias de la Canal Intento de psicoanaacutelisis de Juana Ineacutes y otros ensayos sorjuanistas (Meacutexico Frente de Afirmacioacuten Hispanista 1972) 47

143 Veacuteanse entre otros trabajos Octavio Paz Sor Juana Ineacutes de la Cruz o las trampas de la fe Georgina Sabat de Rivers En busca de Sor Juana Margo Glantz Sor Juana la comparacioacuten y la hipeacuterbole Gerard C Flynn Sor Juana Ineacutes de la Cruz Stephanie Merrim Feminist perspectives on Sor Juana Ineacutes de la Cruz Pamela Kirk Sor Juana Ineacutes de la Cruz religion art and feminism

164 JUAN FRANCISCO MAURA

de los documentos maacutes importantes con que contamos en relacioacuten a la aportacioacuten fe-menina en el proceso de la conquista de Ameacuterica Su importancia viene dada por varios factores Primero es uno de los primeros testimonios mdashsi no el primeromdash en donde se expone abiertamente la indispensable colaboracioacuten de las mujeres en el descubrimien-to y conquista de tierras en el Nuevo Mundo laquoQue si no fuera por ellas todos fueran acabadosraquo En segundo lugar la informacioacuten vertida en estas liacuteneas presenta en parte la manera de pensar de una mujer espantildeola en tales circunstancias Extraordinario tes-timonio de primera mano que nos da una idea de lo que significoacute en muchos casos el valor y entrega constantes de muchas de estas mujeres que auacuten a riesgo de perder sus vidas no dudaron en luchar al lado de los hombres por una causa que consideraban laquocomuacutenraquo

La relevancia histoacuterica de dicha carta hace que merezca ser transcrita en su totali-dad

Carta de dontildea Isabel de Guevara a la princesa gobernadora dontildea Juana exponiendo los trabajos hechos en el descubrimiento y conquista del Riacuteo de la Plata por las mujeres para ayudar a los hombres y pidiendo repartimiento

para su marido Asuncioacuten 2 de julio de 1556

Muy alta y muy poderosa sentildeora

A esta provincia del Riacuteo de la Plata con el primer gobernador de ella don Pedro de Mendoza hemos venido ciertas mujeres entre las cuales ha querido mi ventura que fuese yo la una y como la armada llegase al puerto de Buenos Aires con mil quinientos hombres y les faltase el bastimento fue tamantildea el hambre que a cabo de tres meses murie-ran los mil esta hambre fue tamantildea que ni la de Jerusalem se le puede igualar ni con otra ninguna se puede comparar Vinieron los hombres en tanta flaqueza que todos los trabajos cargaban de las pobres mu-jeres asiacute en lavarles las ropas como en curarles hacerles de comer lo poco que teniacutean limpiarlos hacer centinela rondar los fuegos armar las ballestas cuando algunas veces los indios les veniacutean a dar guerra hasta cometer a poner fuego en los versos y a levantar los soldados los que estaban para ello dar arma por el campo a voces sargentean-do y poniendo en orden los soldados porque en este tiempo como las mujeres nos sustentamos con poca comida no habiacuteamos caiacutedo en tanta flaqueza como los hombres Bien creeraacute V A que fue tanta la so-licitud que tuvieron que si no fuera por ellas todos fueran acabados y si no fuera por la honra de los hombres muchas maacutes cosas escribiera con verdad y los diera a ellos por testigos Esta relacioacuten bien creo que la escribiraacuten a V A maacutes largamente y por eso cesareacute Pasada esta tan peligrosa turbunada determinaron subir el riacuteo arriba asiacute flacos como estaban y en entrada de invierno en dos bergantines los pocos que quedaron vivos y las fatigadas mujeres los curaban y los miraban y les guisaban la comida trayendo la lentildea a cuestas fuera del naviacuteo y animaacutendolos con palabras varoniles que no se dejasen morir que presto dariacutean en tierra de comida metieacutendolos a cuestas en los

165ESPANtildeOLAS DE ULTRAMAR EN LA HISTORIA Y EN LA LITERATURA

bergantines con tanto amor como si fueran sus propios hijos Y como llegamos a una generacioacuten de indios que se llaman tinbues sentildeores de mucho pescado de nuevo los serviacuteamos en buscarles diversos modos de guisados porque no les diese en rostro el pescado a causa de que lo comiacutean sin pan y estaban muy flacos Despueacutes determinaron subir el Paranaacute arriba en demanda de bastimento en el cual viaje pasaron tanto trabajo las desdichadas mujeres milagrosamente quiso Dios que viviesen por ver que en ellas estaba la vida de ellos porque todos los servicios del naviacuteo los tomaban ellas tan a pechos que se teniacutea por afrentada la que menos haciacutea que otra sirviendo de marear la vela y gobernar el naviacuteo y sondar de proa y tomar el remo al soldado que no podiacutea bogar y escotar144 el naviacuteo y poniendo por delante a los soldados que no se desanimasen que para los hombres eran los trabajos verdad es que a estas cosas ellas no eran apremiadas ni las haciacutean de obliga-cioacuten ni las obligaba si solamente la caridad Asiacute llegaron a esta ciudad de la Asuncioacuten que aunque ahora estaacute muy feacutertil de bastimentos en-tonces estaba de ellos muy necesitada que fue necesario que las muje-res volviesen de nuevo a sus trabajos haciendo rosas con sus propias manos rosando y carpiendo y sembrando y recogiendo el bastimento sin ayuda de nadie hasta tanto que los soldados guarecieron de sus fla-quezas y comenzaron a sentildeorear la tierra y adquirir indios e indias de su servicio hasta ponerse en el estado en que ahora estaacute la tierra He querido escribir y traer a la memoria de V A para hacerle saber la ingratitud que conmigo se ha usado en esta tierra porque al presente se repartioacute por la mayor parte de los que hay en ella asiacute de los anti-guos como de los modernos sin que de miacute y de mis trabajos se tuviese ninguna memoria y me dejaron de fuera sin me dar indio ni ninguacuten geacutenero de servicio Mucho me quisiera hallar libre para me ir a presen-tar delante de VA con los servicios que a SM he hecho y los agravios que ahora se me hacen mas no estaacute en mi mano porque estoy casada con un caballero de Sevilla que se llama Pedro de Esquivel que por servir a SM ha sido causa que mis trabajos quedasen tan olvidados y se me renovasen de nuevo porque tres veces le saqueacute el cuchillo de la garganta como allaacute VA sabraacute A que suplico mande me sea dado mi repartimiento perpetuo y en gratificacioacuten de mis servicios [en el origi-nal del AHN Diversos doc 141 dice ademaacutes mande que sea proveydo mi marido de alguacuten cargo conforme a la calidad de su persona pues el de su parte por sus servicios lo merece] lo merece Nuestro sentildeor acre-ciente su Real vida y estado por muy largos antildeos De esta ciudad de la Asuncioacuten y de julio 2 1556 antildeosServidora de V A que sus Reales manos besa

Dontildea Isabel Guevara

144 Sacar agua de un riacuteo acequia o presa

166 JUAN FRANCISCO MAURA

Sobremdash A la muy alta y muy poderosa sentildeora Princesa dontildea Joana Gobernadora de los reinos de Espantildea etc ndash En su Consejo de Indias (Isabel de Guevara 619-21)

Iroacutenicamente la carta teniacutea que llegar a manos de la desdichada heredera del trono de Castilla e hija de los Reyes Catoacutelicos Juana laquola Locaraquo que habiacutea muerto el antildeo an-terior Son profeacuteticas las palabras de esta mujer no soacutelo porque sus hechos personales quedasen en el olvido sino porque incluso se ha borrado la historia de las mujeres en el Nuevo Mundo negando su presencia Por lo menos Isabel Guevara tuvo acceso a una pluma iquestCuaacutentas seriacutean las que ni siquiera sabriacutean escribir

Otra contemporaacutenea fue dontildea Leonor de Iciz que vivioacute durante la segunda mitad del siglo XVI Interesa sobre todo por los sonetos que escribioacute en elogio de Ercilla soldado que participoacute en la conquista de Chile y que se inmortalizoacute con su obra La Araucana (Serrano y Sanz 269 534) Lo mismo hizo Dontildea Bernarda Lintildeaacuten en 1610 autora de otro soneto en memoria del capitaacuten Gaspar Peacuterez de Villagraacute que participoacute en la conquista de Nuevo Meacutexico (Serrano y Sanz 270 14) Los escritos de estas mujeres tratan de de dos de las eacutepicas maacutes dramaacuteticas de la conquista

En el Peruacute y en pleno siglo XVII aparece otra fundadora de conventos Sor Bernardina de Jesuacutes que ademaacutes fue comparada con Santa Teresa por la semejanza de sus laquocartasraquo con las de la santa de Avila Fue fundadora del convento de Tacunga en Quito maacutes tarde destruiacutedo por un terremoto Dice Serrano y Sanz con respecto a su biografiacutea un tanto legendaria que fue carmelita descalza de Lima y hermana de Dontildea Mariacutea Benavides y Esquivel abuela de D Pedro de Peralta Barnuevo (Serrano y Sanz 269 553) Dicen que esta santa se alimentoacute durante treinta antildeos con laquochochos y caacutescaras de naranja hecho tan raro como increiacuteble Cuando fallecioacute reparaban las monjas en ponerle una vara de azucenas porque habiacutea sido casada y aquellas flores aparecieron milagrosamente sobre el cadaacuteverraquo (Serrano y Sanz 269 553)

Otra limentildea del primer cuarto del siglo XVII con reputacioacuten de santa fue Dontildea Luisa Melgarejo En este caso no se trata de una religiosa de oficio sino de la mujer del doctor Juan de Soto La uacutenica diferencia es que dontildea Luisa al parecer teniacutea laquovisiones y reve-lacionesraquo lo que debioacute poner nervioso a maacutes de un miembro del tribunal del laquoSanto Oficioraquo que consideraron sus escritos laquoculpadosraquo De su papel de laquosantaraquo pasa por lo tanto al de laquoposesaraquo o laquoendemoniadaraquo El inquisidor de Lima Gaitaacuten escribioacute un infor-me donde a traveacutes de la opinioacuten puacuteblica y de otras averiguaciones se deciacutea que dontildea Luisa Melgarejo laquomujer santaraquo sabiacutea cuando las almas de los difuntos saliacutean del Purga-torio El diacutea 14 de noviembre de 1623 se decidioacute tomar posesioacuten de todos los cuadernos en los que habiacutea escrito las experiencias de todos sus laquoarrobos suspensiones extasis y revelacionesraquo Estos cuadernos una vez recogidos presentaron toda una serie de al-teraciones borrones adiciones enmiendas incluso diferente letra por lo que despueacutes de haber sido examinados resultaron culpables145 Excelente imaginacioacuten debioacute tener dontildea Luisa Melgarejo la suficiente al parecer para convencer a algunos miembros de la iglesia de que en sus escritos laquohabiacutea algoraquo que mereciacutea la pena Estas cosas ocurriacutean en Lima uno de los centros culturales maacutes importantes de la vida social y poliacutetica en la Ameacuterica espantildeola Lima a comienzos del siglo XVII seguacuten el empadronamiento llevado

145 Serrano y Sanz 270 47 Veacutease J T Medina Historia del tribunal del Santo Oficio de la Inquisicioacuten de Lima (1569-1820) (Santiago Imprenta Gutemberg 1887) Tomo II 34-41

167ESPANtildeOLAS DE ULTRAMAR EN LA HISTORIA Y EN LA LITERATURA

a cabo en 1614 por el marqueacutes de Montesclaros era una ciudad de 25000 habitantes de los que 11000 eran espantildeoles El nuacutemero de religiosos y religiosas llegaba a 1720 (Pittaluga 77)

Se sabe que en la Isla de Santo Domingo durante el siglo XVI nacioacute o al menos resi-dioacute una poeta de ceacutelebre apellido en los aconteceres del Nuevo Mundo Dontildea Elvira de Mendoza de la que se conserva un manuscrito en la Real Academia de la Historia laquoCantares miacuteos que estaacuteis rebeladosraquo Eugenio de Salazar hace un elogio de ella como poeta en un Soneto a la ilustre Poeta y Sentildeora Dontildea Elvira de Mendoza moradora en la ciudad de Santo Domingo (Serrano y Sanz 270 53)

Nacida en Burgos sobre el antildeo 1590 dontildea Luisa de Padilla merece un lugar aparte dentro del grupo de mujeres escritoras de su eacutepoca Por su estilo faacutecil y castizo su no-vedad de pensamientos y su rica erudicioacuten recibioacute el siguiente comentario de Manuel Serrano y Sanz laquoPocas figuras hay en nuestra historia literaria femenil que puedan compararse a esta eminente prosista acaso la maacutes notable de cuantas florecieron en Es-pantildea durante el siglo XVIIraquo (Serrano y Sanz 270 95-96) Este comentario y comparacioacuten deberiacutea ampliarse para que tambieacuten incluyese a laquola historia literaria varonilraquo

Dontildea Luisa fue defensora de la labor que la Inquisicioacuten estaba realizando en la laquolim-piezaraquo de mujeres laquosoldados del demonioraquo que existieron en algunas provincias espa-ntildeolas en aquel tiempo Muchas de las mujeres que combinaban la magia con los po-deres curativos fueron condenadas no solamente por hombres de la Inquisicioacuten sino tambieacuten por mujeres de todas las clases sociales como es el caso de Luisa de Padilla condesa de Aranda En su obra Elogios de la verdad e invectiva contra la mentira preveniacutea contra aquellos que practicaban artes en contra de la religioacuten cristiana La magiacutea negra seguacuten Padilla era la causante de que muriesen casi tantas personas como otras causas naturales habieacutendose descubierto hasta seis mil brujas en Vizcaya y Guipuzcua con-fesando una mujer de un pueblo pequentildeo haber matado con su laquomagiaraquo a ochocientas personas (Perry 31) Eran estos laquomales de ojoraquo y maldiciones seguacuten la autora las causas de que se secasen los pechos de las madres lactantes que se separasen las parejas casa-das y que abortasen las embarazadas (Perry 31)

Si se tiene en cuenta que dontildea Luisa estuvo emparentada con la maacutes rancia aristocra-cia de su tiempo o lo que es lo mismo con algunos de aquellos que en cierta manera dirigiacutean los destinos de Espantildea en aquella eacutepoca (Duques de Lerma Duque de Uceda Marqueacutes de Cueacutellar Conde de Santa Gadea Marqueacutes de Belmonte por citar algunos) se comprenderaacute mejor su identificacioacuten con una institucioacuten que en teoriacutea velaba por la salvaguarda de los valores laquoeternosraquo de una Espantildea destinada a ser la campeona del ca-tolicismo durante los siglos XVI y XVII El padre de dontildea Luisa fue don Martiacuten de Padilla y Manrique extraordinario militar que proboacute su valor contra enemigos moriscos ingle-ses holandeses piratas berberiscos y el renegado genoveacutes Muley Faxad Fue veterano de la batalla de Lepanto donde apresoacute a cuatro galeras y acompantildeoacute con su escuadra a la reina Dontildea Margarita de Austria cuando vino de Geacutenova en 1598 laquoHabiacutea obtenido a 24 de julio de 1587 el tiacutetulo de Conde de Santa Gadea y en 1596 el de Capitaacuten General de la Armada del mar Oceacuteanoraquo (Serrano y Sanz 27095-96)

Por otra parte tambieacuten se sabe que dontildea Luisa participoacute directamente y desde tem-prana edad en la praacutectica de algunas actividades intelectuales como la historia y la arqueologiacutea a la vez que dedicaba su tiempo a virtudes cristianas como la caridad y el socorro de los necesitados (Serrano y Sanz 270 97) Resulta mucho maacutes faacutecil compren-

168 JUAN FRANCISCO MAURA

der la postura ideoloacutegica de esta gran mujer si tienen en cuenta ademaacutes de los factores antes mencionados otros tantos de caraacutecter biograacutefico concernientes a su educacioacuten y matrimonio

Otra escritora fue la mexicana dontildea Mariacutea Casilda Pozo natural de Temestla (Meacutexi-co) Nacida en el mes de abril de 1682 dejoacute escrita su biografiacutea en 16 cuadernos el ma-nuscrito original se encuentra en la biblioteca del colegio de San Gregorio de Meacutexico Fue su confesor el jesuiacuteta Domingo Quiroga que fue quieacuten la incitoacute a escribir su obra (Serrano y Sanz 270 137) Sor Juana de San Antonio aparece a principios del siglo XVII formando parte de un grupo de religiosas espantildeolas que fueron a Manila por la ruta de Meacutexico Ademaacutes de distinguirse por sus cualidades personales su obra interesa por ofrecer informacioacuten testimonial y costumbrista acerca de la forma de vestir de chinos y japoneses (Serrano y Sanz 270 225)

Otra monja esta vez ecuatoriana fue Gertrudis de San Ildefonso Nacida en 1652 profesoacute su vocacioacuten en el convento de Santa Cruz de Quito dejando escrita su vida por mandato de su confesor el padre Martiacuten de la Cruz el cual hizo una biografiacutea laquoen tres gruesos voluacutemenesraquo Gertrudis de San Ildefonso murioacute en 1709 (Serrano y Sanz 270 300) en olor de santidad

Sor Mariacutea Ana Agueda de San Ignacio nacioacute el 3 de marzo de 1695 en la dioacutecesis de la puebla de los Angeles en un rancho del lugar de Santiago Tecaliacute (Serrano y Sanz 270300) Esta monja mexicana escribioacute varias obras durante su vida conventual a lo largo de la cual desempentildeoacute el cargo de priora por muchos antildeos Entre sus obras todas de caraacutecter piacuteo y de laquoamor divinoraquo escribioacute un curioso y laquocopiosoraquo tratado de la Leche virginal de la Soberana Madre de Dios El padre Fr Juan de Villa Saacutenchez hace el siguiente comentario al respecto laquoen que hablando primero en sentido natural de los beneficios que debemos a Nuestra Sentildeora pasa a tratar en sentido miacutestico y alegoacuterico enten-diendo en la leche la doctrinaraquo (Serrano y Sanz 270301) Mexicana fue tambieacuten Sor Petronila de San Joseacute que ejercioacute como abadesa del Real monasterio de Jesuacutes Mariacutea de la ciudad de Meacutexico Escribioacute Vidas de varias religiosas ejemplares obra que tiene su im-portancia ya que al parecer laquoDe esta obra se sirvioacute D Carlos de Siguumlenza y Goacutengora para escribir su Parayso Occidental (Meacutexico 1684) seguacuten eacutel mismo declara en el proacutelogo diciendo lsquoa quien si hay algo bueno en esta historia se le debe todorsquoraquo (Serrano y Sanz 270 354) Menos conocida fue su compatriota Sor Luisa de Santa Catalina natural de Xacona laquopueblo situado en las inmediaciones de Zamora (Meacutexico)raquo siendo bautizada en 1682 Escribioacute Cartas espirituales a su confesor el P Juan Loacutepez de Aguado (Serrano y Sanz 270 361-62)146

Todos estos escritos la mayoriacutea de ellos ignorados por el gran puacuteblico tienen la im-portancia de darnos una perspectiva diferente En otras palabras ensentildearnos la maacutes refinada sensibilidad de muchas mujeres que permanecieron y en su mayoriacutea siguen permaneciendo a laquooscurasraquo de una eacutepoca tan rica de la literatura espantildeola como fue el Siglo de Oro Este siglo fue tambieacuten en su dimensioacuten literaria y artiacutestica patrimonio de la mujer

146 Para profundizar en muchas de estas escritoras hispano-americanas la consulta de la Biblioteca Hispano-Americana de Beristain de Souza resulta de capital importancia

169ESPANtildeOLAS DE ULTRAMAR EN LA HISTORIA Y EN LA LITERATURA

Sor Nada ardores divinos de una monja adolescente escritos ineacutedi-tos de una recieacuten profesa del siglo XVI147

iexclQueacute encantadores son tus amores hermana miacutea espo-sa iexclQueacute deliciosos son tus amores maacutes que el vino Y el aroma de tus perfumes es mejor que el de los baacutelsamos Miel virgen destilan tus labios esposa miel y leche hay en tu lengua y el perfume de tus vestidos es como aroma de incienso (Cantar de los Cantares 4 10-11)

Sor Nada llamada asiacute por humildad seguacuten dice el Indice de manuscritos de la Biblio-teca Nacional de Madrid es uno de los ejemplos maacutes desconocidos e interesantes que tenemos de la poesiacutea y prosa amoroso-religiosa del siglo XVII Hasta la fecha nunca se habiacutea publicado su obra e incluso hasta el antildeo 1995 para mi sorpresa no habiacutea copias microfilmadas de sus manuscritos en la Biblioteca Nacional Serrano y Sanz en su libro Apuntes para una Biblioteca de Escritoras Espantildeolas hace una escueta y pasajera mencioacuten de esta mujer y de su obra (68-69) siendo eso todo lo que hasta ahora se sabiacutea de ella Sus escritos consisten en los siguientes manuscritos

1 laquoEn queacute consiste un verdadero amor de Diosraquo 9 hojas uacutetiles en 4ordm letra del siglo XVII Biblioteca Nacional de Espantildea Manuscrito 1295926

2 laquoPintura del Propio Amorraquo laquoPintura del propio Amorraquo 10 hojas uacutetiles en 4ordm letra del siglo XVII Biblioteca Nacional de Espantildea Manuscrito 1295927

3 laquoEsplicacioacuten sobre en queacute consiste la paz del Almaraquo laquoQuartillas aacute un Alma que padece soledad interiorraquo 7 hojas uacutetiles en 4ordm letra del siglo XVII Biblioteca Nacio-nal de Espantildea Manuscrito 1295828

En cuanto a su persona soacutelo se nos dice que laquose encubrioacute con este seudoacutenimo laquoSor Nadaraquo Esta monja desconocida de origen hispanoamericano posee toda la frescura e ingenuidad de una joven apasionada metida por vocacioacuten u obligacioacuten a ejercer la profesioacuten maacutes comuacuten para mujeres de cierta clase social de su tiempo En sus liacuteneas podemos encontrar un misticismo simple incluso en algunos momentos infantil pero a su vez lleno de una fuerza y sensualidad interior poco comuacuten en escritos de este geacute-nero que desborda los liacutemites del laquoamor divinoraquo a traveacutes de los diaacutelogos entre el Alma y el Esposo Sor Nada consigue proyectar su amor a Dios maacutes allaacute de una experiencia romaacutentica Su experiencia es sincera y genuinamente miacutestica trascendiendo la imita-cioacuten o la propia creacioacuten poeacutetica ficcionalizada (Hatzfeld 30) Algunos pasajes son de un

147 Veacutease mi artiacuteculo Sor Nada ardores divinos de una monja adolescente escritos ineacuteditos de una monja profesa del siglo XVIIraquo Espeacuteculo Revista de estudios literarios 26 (2004) 1-10 Universidad Complutense de Madrid http wwwucmesinfoespeculonumero26sornadahtml

170 JUAN FRANCISCO MAURA

alto contenido eroacutetico con sustantivos y metaacuteforas que recuerdan la maacutes iacutentima unioacuten amorosa en unos casos y el tierno amor maternal en otros

[T]e miro Jesus mio desnudo a las inclemencias del tiempo y ardien-do en puro fuego de Amor por la salud de las Almas y me ensentildeas a que te ame con todo mi corason y puresa de espiritu No atendiendo ni buscando umanos intereses ni a solisitar consuelos ni regalos espi-rituales que suelen empantildear la puresa del noble corason No mi Jesus amable pues antes me ensentildeaste tu puro Amor que desnudo sean [sic] de encaminar mis passos desde el pesebre asta la cuna en donde te miro tan desnudo como el pesebre y todo Sentildeor por mi Amor (Mss 12959 26 hoja 1 v)

El manuscrito (12959 27) de la mencionada serie de tres contiene algunas correccio-nes quizaacute hechas por el confesor o quizaacute por ella misma cuando se dirige con excesiva familiaridad y arrebatado fervor a su Amado148 He escogido el manuscrito (12959 Caja 28) en primer lugar por ser el ejemplo maacutes representativo de su poesiacutea y prosa En este manuscrito encontramos de forma maacutes directa que alegoacuterica toda la frescura de un diaacutelogo entre Jesuacutes y el alma que raya como diriacutea Cervantes laquoa la llana y sin rodeosraquo (667 lib 2 cap 38) con el doloroso y a veces desesperado deseo de la entrega y la unioacuten final con el Amado La ortografiacutea no ha sido corregida respetaacutendose el texto ori-ginal149 Veamos el siguiente fragmento

Mira que te amo con Amor de padre y con Amor de esposo el mas fino y puro enamorado que no tan solo me presio de darte mi mano sino tambien todo mi cuerpo y sangre para que con mi pan de vida te sustentes y te regales a tus anchuras y que con mi propio espiritu vivas en paz como tu lo deseas y que mis amores sean unico alivio en tus trabajos en esta mortal vida pues si esto es asi y sabes que muero por darte vida dime esposa mia de que te fatigas Dame querida tus bras-sos y dime si me amas como yo te amo (Hoja 4)

148 La antologiacutea de Promis ha procurado insertar entre los textos antoloacutegicos algunos que se refieren a la es-critura de mujeres fundamentalmente de aquellos generados en el interior de los espacios conventuales Estos textos se fundan como laquohistorias de vidasraquo y responden casi siempre a los requerimientos de los confesores de las monjas coloniales En este sentido resulta valiosiacutesima la incorporacioacuten de la llamada Relacioacuten autobiograacute-fica de Sor Ursula Suaacuterez como una muestra significativa de la escritura monjil entendida en esta eacutepoca (como tambieacuten en la tradicioacuten europea medieval) inserta en las denominadas laquolabores de manoraquo de las religiosas ya que el texto escrito por mandato se convertiacutea en una suerte de entramado o tejido linguumliacutestico es decir en un nuevo bordado que la mayor parte de las veces el confesor convertido en censor iba haciendo tachando y enmendando En la antologiacutea Promis agrega un texto de Sor Tadea Garciacutea de la Huerta titulado Relacioacuten de la inundacioacuten que hizo el riacuteo Mapocho de la ciudad de Santiago de Chile en el monasterio de Carmelitas titular de San Rafael el diacutea 16 de junio de 1783 se trata de un poema tipo romance escrito en versos octosilaacutebicos y que da cuenta de lo sucedido ese diacutea en el convento (Resentildea de la literatura del reino de Chile de Joseacute Promis Eddie Morales Pintildea httpwwwupaclpublicaciones2002literatura_promishtm)

149 Son frecuentes las faltas ortograacuteficas Una de ellas es el uso constante del seseo La ausencia de acentua-cioacuten y puntuacioacuten exceptuando alguacuten punto o coma arbitrario no seguido casi nunca de mayuacutescula inicial lo mismo que el uso igualmente aribitrario de la h o de b v r q g j m n x etc No olvidemos de la misma forma la laxitud linguumliacutestica existente en el siglo XVII (no sabemos a queacute parte de eacuteste pertenece el manuscrito) asiacute como la joven edad de la monja

171ESPANtildeOLAS DE ULTRAMAR EN LA HISTORIA Y EN LA LITERATURA

Los versos del presente manuscrito poseen la misma fuerza que tiene su prosa Con una estructura estroacutefica indefinida estaacuten aparentemente corregidos por alguien que tu-vo la oportunidad de conocer personalmente a la autora Muy probablemente se trate del padre al que hace referencia al principio del primer manuscrito laquoMandame el Pd que le declare en que consiste un verdadero amor a Diosraquo a continuacioacuten continuacutea con su caracteriacutestica humildad laquo[O]bedesere y dire lo q Dios me inspire segun mi rudesa y simplisidadraquo (Mss 12959 26) En cuanto a la fuerza pasional de esta joven observamos con cierta tristeza coacutemo aparece sublimada en sus escritos con toda la enegiacutea de una joven mujer llena de intensidad y vida pero encerrada en los liacutemites de un convento Veamos un ejemplo en donde responde el Alma en los siguientes versos

O mi enamorado Jesus O mi dulse y tierno amanteO alegria de los sielos O dulse Jesus amable

(Toda Sentildeor me derrito toda Sentildeor me desagoy quiero vivir por ti ea sentildeor abrasadme) [Tachado en el original]

Toda Sentildeor me derrito toda Sentildeor me desagoy quiero morir por vos ea Sentildeor que ya acabo

Ya tus amores me llaman ya tus perfumes me traencon suspiros y agonias Sentildeor hasta que te alcanse

O mi Jesus amoroso no puedo mas dilatarmeya la pasiensia me falta dulse Jesus abrasadme

(No puedo vivir sin vos no puedo mas dilatarmeya la pasiensia me falta dulse) [Tachado en el original]

No puedo vivir sin vos mi dulse Jesus amablepues me teneis echisada siendo mi esposo y mi Padre

Ay que me abraso Ay que me quemo del Amor deJesus nasareno como no tocan y tantildeen a fuego150

Estos versos llenos de arrebato sublimado conectan con toda la tradicioacuten miacutestica es-pantildeola que se remonta a Ramoacuten Llul y que culmina en el maacutes universal de nuestros

150 En toda la fuerza y simbologiacutea del amor maacutes iacutentimo del maacutes alto y sublime placer de la unioacuten de los amantes tal como lo encontramos en el Cantar de los Cantares y en San Juan de la Cruz Leemos en la Biblia

Ya me he quitado la tuacutenica iquestCoacutemo volver a vestirme Ya me he lavado los pies iquestCoacutemo volver a ensuciarlosMi amado metioacute su mano por el agujero (de la llave) y mis entrantildeas se estremecieron por eacutel Me levanteacute para abrir a mi amado Mis manos destilaron mirra y mis dedos mirra exquisita en el pestillo de la cerradura (5 3-5)

Nos ocurre lo mismo con San Juan de la Cruz en su insuperable poema laquoLlama de amor vivaraquo

iexclOh cauterio suaveiexclOh regalada llagaiexclOh mano blanda iexclOh toque delicadoque a vida eterna sabey toda deuda pagaMatando muerte en vida la has trocado

172 JUAN FRANCISCO MAURA

miacutesticos San Juan de la Cruz Esta tradicioacuten se extiende hasta finales del siglo XVII esto es hasta los finales del Barroco siendo un poco maacutes tardiacuteo en la Ameacuterica espantildeola Sin tener como propoacutesito discutir en el presente trabajo a queacute corriente miacutestica pertenece la obra de Sor Nada es necesario resaltar no obstante el hecho de que estaacute escrito por una mujer y ademaacutes de tierna edad El manuscrito 12959 Caja 26 termina con estas pa-labras laquo[T]odas estas boverias escrivi por entretenimiento siendo resien profesa en la religion Sor Nadaraquo Mas no por la juventud de su autora los escritos dejan de tener lo-gradas metaacuteforas imaacutegenes y siacutembolos sacados de la naturaleza La alegoriacutea de la unioacuten matrimonial poseeacute el fuego liacuterico de la maacutes apasionada de las relaciones amorosas vivi-ficada por perfumes flores insectos animales escarchas nieves o abrojos Por lo tanto aunque la narracioacuten destile cierta ingenuidad no carece por ello de un vocabulario rico con el sabor popular de la poesiacutea de los cancioneros y romances de tradicioacuten renacen-tista No ha sido otra mi intencioacuten que la de rescatar del olvido unos escritos en prosa y en verso llenos de frescura y espontaneidad que nos muestran la pasioacuten con que la joven novicia se laquoentrega en cuerpo y almaraquo a los menesteres de su profesioacuten guiada por un padre espiritual en esos primeros antildeos de formacioacuten Esta ha sido la razoacuten por la que presento a continuacioacuten el citado manuscrito en su totalidad

Sor Nada (Mss 1295928)

laquoEsplicacion sobre en que consiste la paz del AlmaraquolaquoQuartillas a un Alma que padece soledad interiorraquo

[7 hojas utiles en 4ordm letra del siglo XVII]

+

Esplicacion sobre en que consiste la paz del Alma

Pareseme segun mi rudo entender que la verdadera paz del Alma con-siste en una muy pura y buena consiencia en un corason liso y bien intensionado en una verdadera rectitud de espiritu en el qual el Alma procura bolar a Dios sin jamas detenerse a respetos umanos ni reparar en que me diran ni de que me censuraran sino me apresuro a seguir a unos entenderes y pareseres dorados en los quales pretende el mundo engantildear y ensuciar si se puede la puresa de un corason unicamente de Dios y de su Santa ley y se lo conserva cristalino con la divina asis-tencia de la gracia y comprendido de su Amor y temor siguiendo la luz divina de tan amante Sentildeor Dios y ombre verdadero con que este ilustrado corason ni se altera ni se mueve por los disfrasses dorados que ase el mundo y sus moradores mayormente con falssas amistades aunque con ellos muestre buena intension Con la misma grasia y luz de Dios conose el buen corason estos disfrasses que le ase el mundo y se retira de todo con espiritu y valor esto sin la menor alterasion sino que en suma paz se retira a buscar a Dios dentro de su mismo corason

173ESPANtildeOLAS DE ULTRAMAR EN LA HISTORIA Y EN LA LITERATURA

y se abrasa con su pura verdad en la qual se le descubren mil interio-res secretos tan solidos puros y verdaderos que la misma Alma queda abismada y de puro grandes no los puede bien comprender ni esplicar pero estos mismos secretos divinos le sirven de espuelas para no solo correr sino bolar con pies de plumas en seguimiento de su bien ama-do Jesus y como este soberano Sentildeor es tan amante de sus espossas las Almas luego que la ve bolar con pies de plumas la sale al encuen-tro en despoblado campo que se deve de llamar Campo de Amor de Dios y el mismo Sentildeor se viene a las manos por ser Dios que nos ama con Amor infinito de Padre benigno y amoroso con que asiendose en contra deso este divino enamorado en lo interyor de el Alma que le busca con ansias de servirle y amarle y en aquella soledad traban una conversasion amorosa y sensilla como la pluma simple de quien esto escrive

Divino enquentroDios y el Alma en la soledad

O Soberano Principe de la paz dise el Alma tus perfumes me traen a ti bolando porque alla en el mundo y sus valedores me pretendian engantildear y entretenerme con pegaminossas amistades que facilmen-te me pudieran envenenar y matarme apartandome de ti Mi dulse Jesus amable mi Redentor Soberano que con tantas ansias me sales al enquentro como siervo [ciervo] erido de mis Amores los quales tu Amor me ofrese para que con tu mismo Amor te ame y te sirva en paz sin perturbarme ni contristarme ni cansarme de padeser pasando si se ofrese por escarchas nieves espinas ni abrojos ni por otros diverssos trabajos ni piedras de contradision que tu me puedes permitir pues por mas que el mar se levante con sus ferosses olas contra mi ni piedras se me tiren al rostro en todo Sentildeor me quieres con serenidad pasifica sin la menor perturbasion Todo Sentildeor quieres que lo tome con Serenidad de espiritu y asi vengo a ti bolando para que mejor me ensentildees a vivir segun las leyes de tu noble condision que me son muy agradables por mas que el mundo me las despresie por segir sus vanidades y torsidas intensiones con apariensias de bien y con este engantildeo y bien me quie-ro mas a mi que no a mi proximo veo que segun mi pareser se pierden muchas Almas y tambien de aquellos que se depresian y pasan por muy espirituales Con que me paresen pocos los que llegan a padeser con desnudes151 de espiritu por tu purisimo Amor y me parese essas se quedan muy atrasadas en la virtud por el peligro de bolver muy atras el paso de modo que se pueden despentildear y pereser en su misma desgra-sia ya por soberbia o por otras enfermedades que se les pega al corason y asi lo pasan como siegos ignorantes sin advertir en sus peligros

151 La letra en cursiva es miacutea

174 JUAN FRANCISCO MAURA

este aquerdo Sentildeor y otros que tu verdad me ensentildea me ase venir uyendo de las paredes del mundo y me vengo a ti Dios mio bolando con las dos Alas del Amor y temor que tu mismo Amor me ofrese tan de gracia y tan de grado que no se duentildeo mio con que lo responder a tan soberano beneficio y finesa de tus entrantildeas de Amorvengo Sentildeor y esposo mio unicamente a descansar en ti pues los peli-gros del camino me an puesto en mucho sobresalto temiendo el per-derte y sin ti perderme para siempre por una eternidad sin fin pues deseo amado mio ganarme ganandote a ti y vivir en ti aora en vida y despues eternamente y estos cuidados me traen fatigada molida y cansada y no podre tener alivio y descanso sino viendome entre tus brassos aunque sea estando en cruz pues ese es el fin de mis deseos vivir y morir en ti ablame mi cordero manso y ensentildeame a que ver-daderamente te ame como fiel esposa ea mi caro amigo dame la ma-no pues sabes Amor mio que en mi no ay mano sin tu misma mano y asi mi Dios y Sentildeor mi Principe Soberano con umilde rendimiento y deseos de alcansarte te suplico me des la mano y me consueles en estos mis trabajos Deseo Sentildeor vivir en paz y los malos amores de mi Naturaleza flaca no me dejan detentar y no quieren por mi desgrasia atropellar con las leyes de tu Amor ni quisiera perturbar mi corason quando me veo con un torvellino de olas y contratiempos que a menu-do me suelen sercar pero si tu Sentildeor me das la mano nada temo sino que me aseguro y vivire en paz sin que me fatiguen los contratiempos pues mi mano en la tuya y mi espiritu en el tuyo por mas borrascas que me envistan no seran bastantes para rendir mi voluntad a la suya bien si para pronunsiar un fiat que resuene bien atras en tus oidos y que en medio de mis fatigas me ponga a cantar tus divinas misericor-dias hea Sentildeor ya pretendo serrar mis labios por no desir mas bove-rias y deseo Sentildeor oir tus palabras de vida eterna abla Sentildeor que tu sierva oye con atension y cuydado mira mi Dios que se me ase tarde y espero con prisa deseando saborearme y aprovecharme de los ecos de tu Santa dotrina pues todas tus palabras saben a eterna vida callen pues mis sentidos y potensias y todo se ponga en paz pues mi dulse y soberano Sentildeor no se escusara de ablar me aun que en mudo silensio hea mi gran Prinsipe de la paz ablame que tus puros amores me traen perdida por estos asperos montes y mis cortos pasos no te pueden dar alcanse mirame mi Dios a tus pies postrada como un vil gusano y me-nor ormiga de la tierraabla Jesus y dise a su esposa el Alma querida esposa mia que me pides y por que te muestras tan fatigada y mal sufrida no vives como corde-rita del campo buscando de mis pechos el sustancial pasto mi Amor no te sustenta y mi grasia te promete eterna vida pues dime amada de que te fatigas y te muestras mal sufrida mira que te amo con Amor de padre y con Amor de esposo el mas fino y puro enamorado que no tan solo me presio de darte mi mano sino tambien todo mi cuerpo y

175ESPANtildeOLAS DE ULTRAMAR EN LA HISTORIA Y EN LA LITERATURA

sangre para que con mi pan de vida te sustentes y te regales a tus an-churas y que con mi propio espiritu vivas en paz como tu lo deseas y que mis amores sean unico alivio en tus trabajos en esta mortal vida pues si esto es asi y sabes que muero por darte vida dime esposa mia de que te fatigas Dame querida tus brassos y dime si me amas como yo te amoResponde el Alma152 Tu mi Dios sabes si yo te amo pues de mi solo se que mis deseos y ansias buelan a ti mas no alcanso a saber si te amo como tu de-seas ser amado y como desconfio tanto de mi y de mis prosederes falssos temo Dios mio perderme y perderte y asi Sentildeor pues no desechas mis Amores y te muestras tan fino en amarme te pido me ensentildees a vivir segun las leyes de tu pura verdad y fina condisionhija mia dise Dios la prueva de un verdadero Amor consiste en sufrir callar y padeser por mi unico Amor y en todo seguir mis pasos sin ja-mas retroseder por mas fragoso que se muestre el camino pues nunca seran tantas las espinas las escarchas ni las nieves ni los vientos bo-rrascosos que te se ofrescan pasar por mi Amor como los que mi tierno y desinteresado Amor paso por ti y siempre con mis pies descalssos y asi hija y esposa mia muestrate costante en seguir lo perfecto de mis passos pues mi braso fuerte sera en ti y peleara por ti y te sera el todo en tus nesesidades y mi Amor te convertira en dulse y suave lo amargo y molesto a la condision de la carrne

Responde el Alma

O mi enamorado Jesus O mi dulse y tierno amanteO alegria de los sielos O dulse Jesus amable

(Toda Sentildeor me derrito toda Sentildeor me desagoy quiero vivir por ti ea sentildeor abrasadme) [Tachado en el original]

Toda Sentildeor me derrito toda Sentildeor me desagoy quiero morir por vos ea Sentildeor que ya acabo

Ya tus amores me llaman ya tus perfumes me traencon suspiros y agonias Sentildeor asta que te alcanse

O mi Jesus amoroso no puedo mas dilatarmeya la pasiensia me falta dulse Jesus abrasadme

(No puedo vivir sin vos no puedo mas dilatarmeya la pasiensia me falta dulse) [Tachado en el original]

No puedo vivir sin vos mi dulse Jesus amablepues me teneis echisada siendo mi esposo y mi Padre

152 La aparicioacuten de una mayuacutescula al principio de una oracioacuten es algo totalmente arbitrario en este ma-nuscrito dada la libertad ortograacutefica de la autora Como se puede observar en la mayor parte de las veces no es el caso

176 JUAN FRANCISCO MAURA

Ay que me abraso Ay que me quemo del Amor deJesus nasareno como no tocan y tantildeen a fuego

Responde Jesus Hija mia tus simples vozes oygo y aunque resuenan bien a mis oidos pero te deseo mas mansa y pasifica en tus fervores ya sabes que no siempre as de vivir en mantillas ni a los pechos de tu Madre por que es rason que padescas con espiritu fuerte como mu-jer valerosa por que a una esposa del Rey soberano y prinsipe de la paz no le estan bien chiquerias ni fervores de nintildea malcriada y ya es ora que la destete su Madre la Naturaleza y que empesando su nueva vida camine con el favor de mi grasia sigiendo mis passos de eterna vida esto con sus pies descalssos segun mis leyes de Amor puro y desinteresado lo tienen ordenado153 y vivir en paz como lo deje en-cargado a mis apostoles Santos repitiendoles varias vezes Vivir en pas y caridad esto es un vivir en Dios y Dios en el Alma y asi hija mia el Alma que vive en paz vive en mi Como mis cortesanos en el cielo y pues me pides que te ensentildee a vivir segun las leyes de mi condision Repito el desir que te debes mostrar sufrida en todo tiempo y estado sin permitir en tu corason que ni aun los fervores se adelanten con estremos ni ademanes sino atiende y aprende de mi purisima Madre pues siempre la veras si bien lo consideras que mientras vivio en el mundo en todos sus trabajos se mostro firme fuerte costante como piedra diamante Pues mirandome nintildeo entre sus brasos desnudo en el pesebre desnudo y crusificado en los brassos de una cruz En estos y otros passos no se mudo su rostro sino que en suma serenidad y pasifico corason toda se sacrificaba enteramente en los brassos de mi Amor y rendido su corason y voluntad en la de mi eterno Padre por ejemplo te la doy y deseo que aprendas de sus nobles calidades pues te aseguro carisima que las leyes de mi condision y pura verdad todo lo allaras enserrado en el corason de mi purisima Madre sedle fiel y descansaras en paz

+

Quartillas a un alma que padese soledad interior

1Un Alma afligida y tristese ve en un campo desiertay en el su esposo la tieneAtormentada y sedienta

153 Es a traveacutes de estas liacuteneas lo que hace suponer que la autora de este diaacutelogo amoroso entre el Alma y Je-suacutes es novicia esto es laquoque estaacute empesando su nueva vidaraquo En las mismas liacuteneas una vez maacutes se hace alusioacuten al laquodesteteraquo de su vida civil laquoa una esposa del Rey soberano y principe de la paz no le estan bien chiquerias ni fervores de nintildea malcriada y ya es ora que la destete su Madre la naturalesaraquo (fol 5)

177ESPANtildeOLAS DE ULTRAMAR EN LA HISTORIA Y EN LA LITERATURA

2Pendiente se ve en el AyreSolo un hilo la sustentasin tocar el pie en el sueloporque del no tome tierra

3Mirandola esta yto a ytoaquel sol que la atraviesay la enviste con sus rayosmas ella no pestantildeea

4Como sigarra padese y como a tal se atormentabatiendo sus mismas Alasy el corason se atraviesa

5Con penas sustos temoresquando se mira assi mesmasin tener valor en nadaporque es la misma flaquesa

6Pero el Amor de su esposotoda su atension le llevay la pone en un abismopero cubierto en tiniebla

7Desea dar algun bueloy subir con ligeresapero se mira travadacon una fuerte cadena

8Clama suspira y padeseMas del todo se sujetaRindiendo su voluntadA la divina clemencia

9Los enemigos del AlmaCruelmente le asen guerray ella aunque firme y constantelos reselos la atormentan

178 JUAN FRANCISCO MAURA

10de todos modos padeseaunque gosa la asistensiadel divino esposo amadoque en su interior se recrea

11Solo de verla penary con verla tan serenadise resibe mil gustosde su sigarra pequentildea

12Le sabe el mundo a mil yelesy su trato le atormentaviendo en el mil falsedadesque todas saben a tierra

13Para poderse librardeja de correr y buelacon las Alas del Amory el mismo Amor se la lleva

Una vida dedicada a un amor divino un amor que le haraacute llenar un buen nuacutemero de cuartillas dedicadas a tan alta empresa Se desconoce si la vocacioacuten de Sor Nada con-tinuoacute con tanta intensidad el resto de sus diacuteas Ciertamente la vida en el covento no era faacutecil En algunos casos la experiencia era traumaacutetica incluso fatal para algunas de las adolescentes de la Ameacuterica Espantildeola Las reglas del claustro eran severas por varias razones Estas joacutevenes si no teniacutean el permiso de la superiora no podiacutean recibir visitas no podiacutean volver a sus casas su correspondencia era censuraba y no podiacutean salir del periacutemetro conventual Igualmente se levantaban antes del amanecer para oir misa tra-bajaban el resto del diacutea y lo maacutes interesante es que muchas veces esta vida era aceptada por muchas

Page 11: Tercera parte: Mujeres en la vida intelectual - …parnaseo.uv.es/Editorial/Maura/TerceraParte.pdf · La Biblia, por su parte, hace repetidas menciones de la mujer y sobre el comporta-

141ESPANtildeOLAS DE ULTRAMAR EN LA HISTORIA Y EN LA LITERATURA

Muy alto y poderoso sentildeor por las letras que a vuestra magestad e escrito a visto el tenor que siempre en este my negocio e tenido agora que veo el peligro que tanto tiempo lo e esperado torno a suplicar lo mismo que asta agora e echo y es que por permisioacuten de dios y por el deudo y sangre que entre vuestra magestad y my ay quiero de vos es-pecial memoria del peligro en que estoy y de los ynconvenientes que se espera allende que dios muy grande mire para ofendido si el Rey my sentildeor pone en efecto lo que todo este reyno tome en este parlamento de todo lo que para estar informado vuestra magestad por su embaxa-dor que aquiacute reside para el remedio tengo esperanza en dios bastaraacute lo que vuestra alteza proveeraacute conque se aga con tiempo no tengo maacutes que decir sino que todo ese reyno y maacutes los perlados y doctas personas que en esta causa defienden estaacuten muy sentidos de la dilacioacuten que su santidad del papa en este negocio a dado y quexanse mucho dello pues por vuestra parte nunca sino justicia se le a demandado y estaacuten el diacutea de oy tan firmes como asta agora para averlo de declarar donde fueren y debe ser entyendese esto poniendo la question como puacuteblicamente se platica que para en lo secreto no ay necesidad de ablar en ello y crea vuestra magestad de que esta verdad y dios me sostienen porque para proseguir mis trabajos no vastaraacute cuerpo humano y confiando en eacutel le suplico guarde la vida de vuestra magestad y acreciente su estado como yo deseo Degramache a 11 de enero= Humilde tiacutea de vuestra magestad= Catalina (RAH Atoacutegrafo precioso Caja 3 Nuacutem 23 Dontildea Catalina de Aragoacuten Reina de Inglaterra Antildeo 1530 Carta al emperador Carlos V pidieacutendole proteccioacuten)

La pobre Catalina presagiaba su triste fin ya que seis antildeos despueacutes la que fuera hija menor de los Reyes Catoacutelicos pasariacutea a mejor vida El no haber podido dar un hijo he-redero al rey Enrique VIII hizo que eacuteste se casase con Ana Bolena declarando nulo su matrimonio anterior sin consentimiento del Papa Roma le excomulgoacute pero eacutel mismo se proclamoacute jefe de la iglesia anglicana A pesar de todo Catalina muere enamorada de su marido y estas uacuteltimas liacuteneas con las que termina su uacuteltima carta y su vida son sufi-cientemente expliacutecitas laquoJuro que sobre todas las cosas mis ojos desean volver a verosraquo (Ximeacutenez de Sandoval 131)

Pese a la enorme influencia directa o indirecta que Erasmo tuviese sobre los pensado-res de la Espantildea del siglo XVI no debemos dejar de destacar tambieacuten la de Fray Luis de Leoacuten tanto por su cariz independiente como por ser un defensor de la libertad indivi-dual Auacuten siendo un representante de la iglesia Catoacutelica tuvo como se sabe que sufrir sus criacuteticas y el rechazo a la exposicioacuten de sus ideas escritos y traducciones biacuteblicas Fray Luis en su obra La perfecta casada deja clara su idea sobre la mujer y la funcioacuten que eacutesta debiacutea ocupar en la sociedad que le tocoacute vivir Para Fray Luis la mujer no era una imagen idealizada del laquoamor corteacutesraquo como la de los escritores neoplatoacutenicos sino un ser de carne y hueso con derechos y responsabilidades en la sociedad de igual manera que el hombre (McKendric 10)

Seriacutea exagerado afirmar que Fray Luis de Leoacuten pone a la mujer por encima del hom-bre en el contexto social Sin embargo y siempre teniendo en cuenta las limitaciones a

142 JUAN FRANCISCO MAURA

las que su profesioacuten y su tiempo le obligaban procura dejar claro que la mujer (casada) merece todo el respeto y ayuda que sea posible de su marido

Porque aunque es verdad que la naturaleza y estado pone obligacioacuten en la casada como decimos de mirar por su casa y de alegrar y des-cuidar continuamente a su marido de la cual ninguna mala condicioacuten de eacutel la desobliga pero no por eso han de pensar que ellos tienen licencia para serles leones y para hacerlas esclavas antes como en todo lo de-maacutes es la cabeza el hombre asiacute todo este trato amoroso y honroso ha de ser principio del marido Porque ha de entender que es compantildeera suya o por mejor decir parte de su cuerpo (Fray Luis de Leoacuten 21 cap 3)

En el reciente estudio de Mar Martiacutenez Goacutengora Discursos sobre la mujer en el Huma-nismo renacentista espantildeol se presenta esa posicioacuten ambigua del fraile agustino en refe-rencia a la funcioacuten de la mujer en la sociedad renacentista

Fray Luis se opone a la funcioacuten otorgada en la eacutepoca a la mujer de mera imagen pasiva Sin embargo fray Luis totalmente encardinado en la cultura del Renacimiento es consciente de la imposibilidad de ignorar ciertos presupuestos De ahiacute la frecuencia en la que el autor anima a las mujeres a buscar una laquofamaraquo puacuteblica que soacutelo una voz masculina puede proveerles Si la mujer desempentildea perfectamente su funcioacuten de casada el marido recibiraacute honra haciendo posible para ella ser alabada por los miembros de la comunidad (187)

Ya se ha mencionado a Isabel la Catoacutelica como impulsora de toda la empresa ultra-marina pero es precisamente gracias a su influencia cuando se pone de moda entre di-versas damas de su tiempo mdashsiglos XV y XVImdash la praacutectica de ciertos estudios y ciencias Beatriz Galindo conocida popularmente como laquoLa latinaraquo fue la que ensentildeoacute latiacuten a la reina Isabel Dice Juliaacuten Juderiacuteas en su obra La Leyenda Negra laquoA los hombres se unen las mujeres en este afaacuten de saber y vemos a Dontildea Beatriz Galindo maestra de latiacuten de la Reina a dontildea Luciacutea de Medrano que explicoacute los claacutesicos en Salamanca a dontildea Fran-cisca de Lebrija que desempentildeoacute una caacutetedra de retoacuterica en la Universidad de Alcalaacuteraquo (Juderiacuteas 74)

Nos cuenta Eustaquio Fernaacutendez de Navarrete que a la muerte del ceacutelebre Antonio de Nebrija quien a impulsos de la reina catoacutelica publicase la primera gramaacutetica europea en lengua romance su hija Antonia le supliacutea en las clases de filosofiacutea y retoacuterica en la Uni-versidad de Alcalaacute cuando eacuteste se encontraba ya viejo y enfermo (xcvi)

No existe ninguna razoacuten para pensar que las las mujeres de clases maacutes favorecidas que pasaron al Nuevo Mundo no disfrutaran de los mismos beneficios y libertades que sus homoacutelogas peninsulares Seraacute preciacutesamente uno de los hijos del mismo Antonio de Nebrija el doctor Sancho de Lebrija quien se encargue de dar poder a Antoacuten Pareja sastre para que la obra escrita de su padre tanto en latiacuten como en romance se distri-buya y venda laquoasiacute en Indias como en otras partesraquo (AHPS Libro del antildeo 1536 Oficio IV Fragmento de un libro Escribaniacutea Cristoacutebal Becerra Folio Primer tercio del legajo Fe-cha 31 de diciembre) En cuanto a las clases menos favorecidas la monarquiacutea espantildeola se preocupoacute desde un primer momento de alfabetizar a todos sus suacutebditos hembras y varones incluyendo los naturales de los territorios conquistados

143ESPANtildeOLAS DE ULTRAMAR EN LA HISTORIA Y EN LA LITERATURA

La educacioacuten de los indiacutegenas americanos fue una sincera preocupa-cioacuten de los reyes de Espantildea casi desde el descubrimiento del Nuevo Mundo Entre las primeras instrucciones de los Reyes Catoacutelicos a sus gobernadores de las Islas Antillas figuran las dadas a Nicolaacutes de Ovan-do en 1503 ordenaacutendole levantar en cada pueblo una escuela junto a la iglesia laquoen la que todos los nintildeos que hubiere en cada una de dichas poblaciones se junten dos veces al diacutea para que alliacute el capellaacuten les ensentildee a leer y a escribirraquo (Vega 9-10)

En la obra renacentista de Cristoacutebal de Villaloacuten El Crotaloacuten se ofrecen unas imaacutegenes muy graacuteficas de las mujeres de la eacutepoca y del laquoexceso de libertadraquo que seguacuten el autor en boca de uno de sus personajes disfrutaban Desde el punto de vista antropoloacutegico y social las siguientes liacuteneas ofrecen una buena imagen de la apariencia fiacutesica de las mujeres de su tiempo y de su actitud vista desde la perspectiva parcial del personaje de la obra

Pues aun no pienses Demophon que la vanidad y perdicioacuten destas livianas mujeres se le ha de pasar a Dios sin castigo que yo te oso afirmar por cosa muy cierta y que no faltaraacute Que por ver Dios su disolucioacuten desenvoltura desverguumlenza y poco recogimiento que en ellas en este tiempo hay visto que asiacute viacutergenes como casadas viudas y solteras todas por un comuacuten viven muy suelta y muy disolutas en su mirar andar y meneo muy curiosas y que por la calle van con un cu-rioso paso en su andar descubierta su cabeza y cabello con grandes y deshonestas crenchas muy alto y estirado el cuello guintildeando con los ojos a todos cuantos topan haciendo con sus cuerpos lascivos meneos (Villaloacuten 860-61 vol 2 canto 20)

El pasaje antes citado pese a parecer humoriacutestico en nuestros diacuteas no lo era tanto en la eacutepoca en que fue escrito ya que la visioacuten de la mujer como parte integrante del pa-trimonio del padre o del marido podiacutea de alguna manera poner en juego laquola honraraquo de su posesor Pese a esto se aprecia como la mujer teniacutea cierto margen de libertad que no se limitaba a las caacutemaras de un convento o a una vida totalmente alejada del mundanal ruido En la siguiente cita continuacioacuten de la anterior se puede observar la serie de ac-cesorios y aderezos que las mujeres de la eacutepoca utilizaban en sus vestidos y cuerpos llamando la atencioacuten la complejidad y sofisticacioacuten de los atuendos descritos

Por esta su comuacuten deshonestidad se cierto que vendraacute tiempo en el cual ha de hacer Dios un gran castigo en ellas pelarse han todos sus cabellos hacieacutendolas a todas calvas y seraacute tiempo en que les quitaraacute Dios todos sus joyeles sortijas manillas zarcillos collares ajorcas y apretadores de cabeza Quitarles ha los partidores de crenchas tenaci-cas salsericas redomillas y platericos de colores y todo geacutenero de afei-tes sahumerios guantes adobados sebos y unturas de manos y otros olores Alfileres agujas prendedores Quitarles ha las camisas muy del-gadas y los manteos vasquintildeas briales saboyanas nazarenas y rebo-cinos y en lugar de aquellos sus cabellos encrespados y enrifados les daraacute pelambre y calvez y en lugar de aquellos apretadores y joyeles

144 JUAN FRANCISCO MAURA

que les cuelgan de la frente les daraacute dolor de cabeza y por cinta de ca-deras de oro muy esmaltadas y labradas les daraacute sogas de muy aacutespero esparto con que se cintildean y aprieten y por aquellos sus muy curiosos y suntuosos ataviacuteos de su cuerpo les daraacute siacutelici y desta manera haraacute Dios que lloren su lascivia y desorden y que de su lujuria y deshonestidad hagan grave penitencia Entonces no habraacute quien las quiera por su he-diondez y miseria en tanto que siete mujeres se encomendaran a un varoacuten y eacutel de todas huiraacute menospreciaacutendolas y aborrecieacutendolas como de gran mal (Villaloacuten 860-61 vol 2 canto 20)

Excelente lista de aderezos femeninos de los cuales pocos son reconocibles en nues-tros diacuteas Gran frustracioacuten debiacutea de tener con las mujeres el autor de estas liacuteneas sien-do al parecer muy poco correspondido por estas uacuteltimas La misoginia que aparece en estas liacuteneas refleja cierta ingenuidad La mujer que se nos presenta debioacute de ser bastante atractiva y sofisticada portando una gran variedad de adornos muchos de ellos de origen oriental y de perfumes que poco tendriacutean que envidiar a los de la mujer moderna En Descripcioacuten breve de toda la tierra del Peruacute Tucumaacuten Riacuteo de la Plata y Chile obra escrita en Chile entre 1603 y 1609 por el padre Reginaldo de Lizarraga nacido en Medelliacuten (Espantildea) en 1545 y trasladado a Ameacuterica a los quince antildeos vemos una asombrosa semejanza con la cita anterior En esta obra del padre dominico dedicada al entonces presidente del Consejo de Indias conde de Lemos observamos coacutemo su descripcioacuten de la vestimenta de las mujeres de Lima ofrece notables semejanzas con la escrita unos antildeos antes en Espantildea En su capiacutetulo 51 titulado laquoDe los vestidos de las mujeresraquo dice lo siguiente

Lo que en esta ciudad [Lima] se admira mucho y aun lo que se ha-biacutea de refrenar es los vestidos y trajes de las mujeres son en esto tan costosas que casi no se sabe como lo pueden sufrir sus maridos La soberbia de ellas es demasiada y no sabemos en lo que han de venir a parar plegue a Dios y no sea en lo que pararon aquellas de quien dice Nuestro Sentildeor Porque las hijas de Sioacuten se ensoberbecieron (esto es las ciudadanas) cuando saliacutean de sus casas llevaban las gargantas ex-tendidas los ojos altos a una y otra parte guintildeaacutendolos los pasos muy compuestos el Sentildeor las volveraacute calvas y les raeraacute los cabellos de sus cabezas les quitaraacute sus chapines y jerbillas bordadas las medias lunas rodetes las cadenas y collares de oro las ajorcas los tocados costosos los punzones de oro para partir las crenchas los zarcillos y los olores los anillos y piedras preciosas etc y por los olores seles daraacute muy pes-tilencial olor y por las cintas de oro sogas de esparto etc No creo yo hay en lo descubierto del mundo ciudad en su tanto ni cuatro veces mayor que a tanta soberbia en este particular como esta nuestra ciu-dad [Lima] llegue acueacuterdome que los antildeos pasados maacutes ha de treinta y ocho que llegando un religioso nuestro de Espantildea nacido y criado en Toledo a nuestro convento de esta ciudad cerca de la fiesta de Cor-pus Christi tratando de ella y de la suntuosidad majestad y riqueza que aquel diacutea en Toledo en calles y ventanas se mostraba le deciacuteamos que no nos espantase porque en nuestra ciudad veriacutea coacutemo no le ha-

145ESPANtildeOLAS DE ULTRAMAR EN LA HISTORIA Y EN LA LITERATURA

ciacutea mucha ventaja Toledo Llegoacute la fiesta vio la riqueza que se mostroacute en los vestidos de las mujeres adornos de ventanas altares y calles dijo que la riqueza de Toledo en este diacutea mostrada no haciacutea muchas ventajas a la de esta ciudad Pues es cierto que hay tanta diferencia de entonces ahora en lo que vamos tratando como de vestidos de aldea a vestidos de corte con justo tiacutetulo se podriacutea moderar por los virreyes esta soberbia pero no seacute por queacute no se modera y siacute seacute por queacute ni los maridos no tienen aacutenimo para moderarlo ni los gobernadores tampo-co (Lizarraga 38 lib 1 cap 51)

Seriacutea injusto y exagerado afirmar que los descubrimientos transoceaacutenicos se hicieron por la presioacuten que ejercieron las mujeres sobre sus amantes para que estos les trajesen laquomaacutes raacutepidamenteraquo todo ese laquosin finraquo de delicadezas exoacuteticas de todo tipo que existiacutean en el Oriente Lo que siacute es cierto es que las mujeres fueron grandes consumidoras de perfumes afeites sedas joyas y otros bienes suntuarios siendo muy conscientes de lo que hoy entendemos como laquomodaraquo Martiacuten Fernaacutendez de Navarrete en su indispensa-ble trabajo sobre los primeros viajes transoceaacutenicos Coleccioacuten de los viajes y descubrimien-tos menciona de paso la situacioacuten de algunas mujeres durante el siglo XV Es precisa-mente esta eacutepoca en la cual portugueses y castellanos entran en conflicto por el control de algunas posesiones en las costas africanas

y crecioacute el lujo a tal extremo que aun las mujeres de los menestrales y artesanos se confundiacutean en los vestidos con las de alto linaje y esta-do usando ropas de ricas telas de seda de oro de lana con forros de martas y pieles y con guarniciones de oro plata y aljoacutefar cuyo gasto por ser ruina de las familias se tratoacute de corregir aunque sin efecto en las Cortes de Palenzuela (M Fernaacutendez de Navarrete 75 21)

El mismo autor resalta la importancia que tuvo para el comercio de Castilla el contar con una buena armada que protegiese a los barcos de piratas y otros peligros Gracias a los inventarios que se han conservado del duque de Beacutejar y de don Alvaro de Zuacutentildeiga conocemos el lujo de estos sentildeores en perlas orientales piedras preciosas telas y demaacutes utensilios de gran valor134 Existe una Real Pragmaacutetica de Fernando el Catoacutelico a Diego Coloacuten en donde aparece nuevamente la conciencia que se teniacutea sobre la manera de ves-tir que deberiacutean llevar las damas castellanas

R PRAGMAacuteTICA SOBRE EL VESTIR Y GASTAR SEDA EN LAS IN-DIAS Valladolid 12 de noviembre de 1509 Don Fernando etc A vos Don Diego Coloacuten nuestro Almirante y Gobernador de las Indias del mar Oceacuteano y a otro cualquier mi Gobernador etc Sepades que yo he sido informado de los muchos gastos y costas que se han hecho y facen y se esperan hacer si yo no lo mando proveer y remediar en el vestir y gastar de las sedas y brocados y bordados en la Isla Espantildeola y en las otras islas y poblaciones de las dichas islas del mar Oceacuteano tra-yendo en ello mucho desorden y yo por el amor y voluntad que tengo

134 AGI Indiferente 418 Libro 2 fol 87v Publicada en DH Am Tom 6 paacutegina 191 DIA Tomo 31 pag 470 DIU Tomo 5 paacuteg 166 Seguacuten la RC a Diego Coloacuten fechada a 14 de noviembre de 1509 es la pragmaacute-tica que se guarda en Castilla sobre la manera de vestir (DIU Tomo 5 paacutegina 174)

146 JUAN FRANCISCO MAURA

a esas dichas Indias y a los pobladores dellas y porque deseo que ellas se aumenten y acrecienten por las haber ganado y descubierto por la gracia de Nuestro Sentildeor con nuestra industria trabajo y costa y los po-bladores dellas no hagan sobre lo suso dicho tan excesivos gastos sino pues que van a ellas con deseo y voluntad de se ayudar y aprovechar del oro que por gracia de Nuestro Sentildeor se descubre de cada diacutea se detengan en lo gastar en semejantes cosas para se aprovechar dellos en otras cosas que maacutes les convenga asiacute para sus personas como para sus haciendas y por evitar y excusar lo suso dicho mandeacute lo platicar con algunos de mi Consejo y por ellos visto se halloacute que porque nuestros suacutebditos y naturales que viven y estaacuten en dichas Indias no gasten sus haciendas en semejantes desoacuterdenes y que las conserven y guarden pa-ra sus menesteres y por el bien y el pro comuacuten de todos generalmente mando dar esta mi carta premaacutetica sancioacuten la cual quiero y mando que haya fuerza y vigor de ley bien ansiacute y a tan cumplidamente como si fuese fecha y promulgada en Cortes por lo cual ordeno y mando que en cuanto a mi merced y voluntad fuere ninguna ni algunas personas de cualquier ley estado condicioacuten que sean que estuvieren de morada o vivienda o en otra cualquier manera en la dicha Isla Espantildeola y en las otras islas desas dichas Indias y tierra firme no puedan traer y traigan ropa alguna de brocado ni de seda ni de chamelote de seda ni zarzahaacuten ni tercenel ni tafetaacuten ni vainas ni correas de espada ni en cinchas ni en sillas ni en alcorques ni en cosa alguna ni tampoco puedan traer ni trai-gan bordados de seda ni chapado de plata ni de oro de martillo ni fila-do ni tejido ni de otra cualquier manera pero que las personas que tu-vieren en las dichas Indias bienes asiacute muebles como raiacuteces que valgan hasta la cuantiacutea de mil castellanos que ellos y los hijos que tuvieren de hasta edad de catorce antildeos traigan jubones y caperuzas y bolsas y ribe-tes y pestantildeas de seda de cualquier color que quisieren con tanto que en una ropa no traigan maacutes de un ribete y que no haya en los dichos ribetes y pestantildeas maacutes anchura de cuanto un dedo pulgar y que no se traiga en los ruedos de las ropas y que puedan traer becas de tercenel y de tafetaacuten y de papahigos de camino aforrados en el mismo tercenel y tafetaacuten y ansiacute mismo permitimos que puedan traer de seda las cora-zas y guarnecer las faldas y gocetes y capacetes y baberas y quejotes y traer cojines de seda en la silla de la jineta y que las mujeres de las tales personas que tuviesen bienes en la dicha cuantiacutea de los dichos mil castellanos y sus hijas siendo doncellas puedan traer gonetes y corseacutes y fajas de dos varas de largo de seda y [borradas dos letras por mancha de tinta] mas y de lo de vestir y mudar cuando quisieren y por bien tuvieren quier sea moyil o faldilla o cota o haacutebito u otra cualquier ropa con tanto que juntamente no puedan vestir ni vistan maacutes de una ni les pongan trepas ni tiras de seda ni de brocado ni de oro tirado ni tejido ni relido ni en las ropas de pantildeo pongan cortapisas ni lisonjas ni trepas ni tiras ni otra guarnicioacuten alguna de seda ni de brocado salvo que puedan traer un ribete o pestantildea de seda de anchura de un dedo pulgar asiacute en

147ESPANtildeOLAS DE ULTRAMAR EN LA HISTORIA Y EN LA LITERATURA

las ropas de seda como en las de pantildeo en los ruedos de las faldas y para las costuras y no otra cosa alguna y que no traigan la dicha seda en las guarniciones de las mulas ni en angarillas ni en sillas ni en pantildeos ni en otra cosa alguna y que ansiacute mismo no puedan traer mantillas de seda ni enforradas en seda sopena que l que contrario hiciere pierda las ro-pas que ansiacute trujere vestidas por primera vez y sea repartido la mitad para el juez que lo juzgare y la otra mitad para el juez que lo acusare y por la segunda que pierda la ropa y se parta como dicho es y sean desterrados de la isla donde viviere para dos antildeos y por cuanto algu-nas personas de los que nuevamente destos reinos de Castillaa van a se avecindar y poblar y estar en las dichas Indias y son de honra acae-ce que no llevan tantos bienes que valgan la dicha cuantiacutea de los mil castellanos que mando que tengan los que hubieren de traer seda en la manera que dicha es que a eacutestos tales no se entienda y extienda lo suso dicho y que puedan traer la dicha seda seguacuten y en la manera que dicha es y no maacutes hasta tanto que haya un antildeo que estaacuten en las dichas Indias que corra y se cuente desde el diacutea que llegare fasta ser cumplido y que siacute cumplido no tuviere bienes que valgan la dicha cuantiacutea de los dichos mil castellanos que no puedan traer seda ninguna so la dicha pena de suso contenida la cual mando a vos las dichas nuestras justi-cias y a cada una de vos que esta mi carta y todo lo en ella contenido y cada cosa y parte dello guardeacuteis y cumplaacuteis y ejecuteacuteis por manera que se cumpla y ejecute lo en ella contenido so pena de perdimiento de los oficios y que seades inhaacutebiles para haber otros semejantes y que pagueis la estimacioacuten de la tal ropa que dejardes de ejecutar y para que lo susodicho sea notorio y ninguno dello pueda pretender ignorancia mando que esta mi carta sea pregonada puacuteblicamente por las plazas y mercados y otros lugares acostumbrados desas dichas islas por prego-nero y ante escribano puacuteblico(Konetzke Coleccioacuten 23)135

Tambieacuten se sabe de las joyas que Rodrigo Ponce de Leoacuten marqueacutes de Caacutediz debioacute dar a dontildea Beatriz Pacheco (M Fernaacutendez de Navarrete 75 22) Lo que siacute queda claro es que la navegacioacuten seraacute a partir de estos antildeos la forma maacutes raacutepida e importante para comerciar con aquellos paiacuteses de Oriente que antes soacutelo era posible alcanzar a traveacutes de rutas terrestres Existe un documento muy representativo de este periodo sobre la posesioacuten de joyas de gran valor por parte de miembros de una de las familias maacutes repre-sentativas residentes en Ameacuterica Los protagonistas son en este caso el almirante Diego Coloacuten y su mujer Mariacutea de Toledo Dice el documento que El jurado Antoacuten Bernal y Juana de Hoces su mujer vecinos de Sevilla en la collacioacuten de Santa Cruz reciben de Diego Coloacuten Almirante de las Indias laquoun joyel muy rico de oro de hechura de escudo que tiene en medio una piedra preciosa grande esmeralda e debaxo de la dicha piedra un rostro de aacutengel labrado en el mismo oro esmaltado e a cada lado del dicho rostro una piedra preciosa diamante pura y debaxo una piedra gruesa pendiente que pesa el dicho

135 AGI Indiferente 418 Libro 2 fol 87v Publicada en DH Am Tom 6 paacutegina 191 DIA Tomo 31 pag 470 DIU Tomo 5 paacuteg 166 Seguacuten la RC a Diego Coloacuten fechada a 14 de noviembre de 1509 es la pragmaacutetica que se guarda en Castilla sobre la manera de vestir (DIU Tomo 5 paacutegina 174)

148 JUAN FRANCISCO MAURA

joyel con todo lo susodicho medio marcoraquo Los citados Antoacuten Bernal y su esposa se dan por pagados de todo lo que se les adeudaba y se obligan a su vez a devolver el joyel al Almirante si este les paga en dinero El 23 de agosto de 1530 siete antildeos despueacutes la virreina canceloacute la anterior obligacioacuten y recuperoacute el mencionado joyel (AHPS Libro del antildeo 1523 Oficio I Escribaniacutea Alonso de la Barrera Folio 1173 Fecha 3 de diciembre) En la misma casa del almirante otra mujer Briolanga Muntildeiz su tiacutea materna se obliga a pagar al mercader genoveacutes Batista Catantildeo 22 ducados de oro laquopor cierto raso que le comproacute y habiacutea de ser pagado en el puerto de Santo Domingoraquo (AHPS Libro del antildeo 1509 Oficio V Libro uacutenico Escribaniacutea Francisco Esquibel Folio Primer tercio del lega-jo Fecha 9 de marzo) Dontildea Briolanga recibiacutea cada antildeo para su mantenimiento 100000 maravediacutes del almirante mayor de las Indias por medio de Gaspar Gurricio monje del monasterio de Santa Mariacutea de las Cuevas (AHPS Libro 1510 Oficio XV Libro II Es-cribaniacutea Bernal Gonzaacutelez Vallesillo Folio primer tercio del legajo Fecha 4 de julio) Resulta interesante hacer notar la temprana presencia (1516) de un ingleacutes en Santo Domingo involucrado igualmente en la compra de telas Se trata de laquoNicolas Arnoteraquo residente en Santo Domingo que debe pagar a Mariacutea Caldera mujer del comendador Diego Barbosa el valor de una cama de sargas de colores de Flandes (AHPS Libro del antildeo 1516 Oficio XV Libro II Escribaniacutea Bernal Gonzaacutelez Vallesillo Folio Primer tercio del legajo Fecha 28 de agosto) Sin embargo anteriormente a esa fecha (1514) encontramos a un veneciano casado con una inglesa mucho maacutes ceacutelebre en sus viajes trasoceaacutenicos laquoSevastiaacuten Cavotoraquo capitaacuten del rey don Fernando y vecino de Sevilla136

De forma paralela se observa tambieacuten un cierto desenvolvimiento de la mujer en su medio lo que equivaliacutea a intercambios de informacioacuten a todos los niveles incluyendo por lo tanto el cultural No era extrantildeo que tuviesen libros de comedias a mano y que llegasen incluso a escribir comedias ellas mismas Efectivamente la sospecha de que las damas llegasen a escribir comedias estaba bien fundada Veacuteanse algunos ejemplos Ana Caro Malleacuten de Soto una de las maacutes famosas dramaturgas de la Sevilla del siglo XVII autora de El conde de Partinupleacutes utiliza el tema del amor en sus maacutes diversas variantes fiacutesicas y espirituales como el eje de casi todas sus obras (Perry 57) Este hecho por otra parte indica el favor del puacuteblico ante un tema tan popular Veacutease otro ejemplo

The drama of this period did not present love and marriage as a simple partnership however and many dramatists contrasted laquoprofaneraquo with laquohonestraquo love Feliciana Enriacutequez de Guzmaacuten who wrote Tragicome-dia Los jardines y campos sabeos in Seville in the early seventeenth cen-tury presented the hero Clarisel as the victim of laquopervertedraquo and fickle Belidiana in part 1 so blinded by her beauty that he feels himself laquoin shackles and in chainsraquo (Perry 57)

Pero las damas espantildeolas de esta eacutepoca no soacutelo escribiacutean comedias algunas tambieacuten se aventuraron a escribir tratados cientiacuteficos Uno de estos casos fue el de Oliva Sabu-co de Nantes Barrera que a finales del siglo xvi escribioacute un tratado meacutedico sobre la naturaleza humana advirtiendo que la lujuria podiacutea perjudicar al cuerpo Se basaba en

136 Sebastiaacuten Caboto o laquoSevastiaacuten Cavotoraquo estaba casado con Juana Cavoto vecina que fue de la ciudad de Londres en la parroquia de San Gil (AHPS Libro del antildeo 1514 Oficio I Libro II Escribaniacutea Mateo de la Cuadra Folio 253 Fecha 14 de Septiembre) citado en CFAAPS Vol 3 doc 128 p 37

149ESPANtildeOLAS DE ULTRAMAR EN LA HISTORIA Y EN LA LITERATURA

la presuncioacuten de que la lujuria provocaba que el cerebro emitiese un liacutequido que iba al estoacutemago enfriaacutendolo y debilitaacutendolo interrumpiendo de esta manera las funciones vitales (Perry 58)

Se sabe que en la eacutepoca de Isabel la Catoacutelica habiacutea muchas mujeres estudiantes y que la propia reina las impulsaba a estos menesteres iniciativa que obtuvo sus frutos en las deacutecadas siguientes Ademaacutes de las conocidas novelistas Mariacutea de Zayas y Sotomayor y dontildea Mariana de Carvajal existioacute toda una serie de escritoras de todos los geacuteneros lite-rarios que florecieron a ambos lados del Atlaacutentico y que no solamente llaman la aten-cioacuten por su nuacutemero sino por la calidad de sus obras Algunas de ellas como dontildea Luisa de Padilla condesa de Aranda calificada por Serrano y Sanz como laquola maacutes notable de cuantas florecieron en Espantildea en el siglo XVIIraquo personificaraacuten a la perfeccioacuten a este tipo de mujeres Tambieacuten deberiacuteamos saber cuaacutentas seriacutean las mujeres que escribieron con pseudoacutenimos masculinos

La informacioacuten sobre las diferentes facetas de la vida femenil con que contamos no es abundante A pesar de todo podemos hacernos una idea maacutes clara de la verdadera situacioacuten de la mujer a traveacutes de una nueva interpretacioacuten de los textos tanto de los medievales como de las croacutenicas de los primeros antildeos del descubrimiento y conquista Algunos estudios relativamente recientes surgidos por el intereacutes general que suscita todo lo concerniente a la mujer han ayudado a considerar nuevas perspectivas La eru-dicioacuten moderna estaacute poniendo en tela de jucio los estereotipos tradicionales en cuanto a la pasividad y relevancia femeninas asiacute como al tradicional misogenismo que se atri-buye a la eacutepoca medieval Cada vez estaacute maacutes claro que la existencia de estas mujeres variaba considerablemente seguacuten la eacutepoca posicioacuten social o situacioacuten geograacutefica por lo que hacer valoraciones categoacutericas sobre laquola situacioacuten de la mujerraquo puede llevar a graves equivocaciones (Dillard 9) Es fundamental para comprender a la mujer espa-ntildeola que pasoacute al Nuevo Mundo tener en cuenta las enormes diferencias de todo tipo que existieron en la sociedad castellana y novomundista Un pintoresco ejemplo es el de laquolas tapadasraquo una usanza de origen aacuterabe que se pondriacutea de moda en Castilla poco despueacutes de la toma de Granada por los Reyes Catoacutelicos y que despueacutes pasariacutea al Peruacute Esta tradicioacuten ha perdurado en algunos pueblos de Espantildea hasta relativamente poco tiempo pueblos como Mojaacutecar (Almeriacutea) y Vejer de la Frontera (Caacutediz) son ejemplo de esta costumbre tambieacuten conocida como el de las laquocobijaacutesraquo

Tras la caiacuteda del reino musulmaacuten de Granada en 1492 la corona espa-ntildeola prohibioacute a las mujeres aacuterabes de Andaluciacutea vestir los velos islaacutemi-cos que cubriacutean sus rostros y ocultaban su identidad No era faacutecil des-arraigar esta costumbre tan ancestral y secular y el emperador Carlos asiacute como su hijo el rey Felipe II tuvieron que repetir la prohibicioacuten Cuando finalmente las moras fueron obligadas a abandonar sus velos y a adoptar el chal castellano comenzaron a utilizar la nueva prenda para cubrir sus rostros dejando al descubierto soacutelo uno de los ojos Esta nueva moda en el uso del chal tradicional nos asegura leoacuten Pi-nelo era extremadamente graciosa sensual y atractiva a causa de la belleza exoacutetica de los ojos de las moras Las mujeres cristianas de Granada Coacuterdoba y Sevilla imitaron pronto la nueva moda de llevar el chal y asiacute nacioacute la laquotapadaraquo hispana Desde Sevilla la nueva moda

150 JUAN FRANCISCO MAURA

fue a las colonias de ultramar y tomoacute raices especialmente en el Peruacute (Martiacuten 317-18)

En un reciente estudio sobre la educacioacuten de la mujer en la Ameacuterica virreinal apare-cen algunos ejemplos significativos de mujeres espantildeolas que consagraron gran parte de sus vidas a la tarea docente Dentro del proceso educativo de las espantildeolas que fueron a las Indias destaca el papel de dontildea Catalina de Bustamante Joseacute de Jesuacutes Vega y Ma-riacutea Luisa Caacuterdenas de Vega dicen en su obra Ameacuterica Virreinal La Educacioacuten de la mujer que esta mujer pocos antildeos despueacutes del descubrimiento del Nuevo Mundo se dedicoacute a trabajar en favor de los indios aunque por desgracia su nombre y sus hechos en la labor docente hayan sido ignorados por los historiadores modernos (Vega 12-13)

Son varias las veces que se nombra a Catalina de Bustamante en el citado estudio y varias las fuentes antiguas en que se recoge la presencia de tan distinguida laquomatrona muy honrada y de buen ejemploraquo de la que ya hablaba Zumaacuterraga y sobre la que se hizo un informe enviado a Carlos V describiendo sus actividades en la Nueva Espantildea firmado por cuatro de los misioneros maacutes conocidos de Meacutexico

El informe dice que los franciscanos de Texcoco acababan de cons-truir un nuevo monasterio y cedido el antiguo A una honrada y honesta y muy virtuosa matrona que se dice Catalina de Bustamante para que ende instruyese a las hijas de los sentildeores de la comarcala cual con el favor de Dios y limosnas que don Hernando [Corteacutes] les haciacutea para su sustentacioacuten [teniacutea en esa casa-hogar] hasta trescientas mujeres antes maacutes que menos (Vega 14)

Estas laquocasas-hogarraquo no estaban regentadas necesariamente por monjas sino por lo que llamaban laquobeatasraquo mujeres que sin estar estar sujetas a la autoridad eclesiaacutestica se dedicaban a un laquolucro honestoraquo Llamadas tambieacuten laquobeateriosraquo eran diferentes a los conventos de monjas y constituiacutean las primeras escuelas de la mujer en la Nueva Espa-ntildea (Vega 20-21) Fue gracias al ejemplo de mujeres como Catalina de Bustamante que dedicaron sus vidas a la educacioacuten de los indiacutegenas que existiesen otras continuando su ejemplo Motoliniacutea dice claramente que laquode ese primer encerramiento (el de Texcoco regentado por Catalina) salieron otras honestas y muy virtuosas duentildeas que ensentildeaban a las maacutes menudasraquo (Vega 23)

Pero dontildea Catalina de Bustamante pese a ser una singular mujer y la iniciadora de la educacioacuten de la mujer en Meacutexico no fue un caso aislado corresponde maacutes bien a un patroacuten al que se ajustaron muchas de las pioneras de la Nueva Espantildea que sembraron instituciones de educacioacuten de la mujer En 1530 unos antildeos maacutes tarde aparecioacute una de las grandes protectoras de la instruccioacuten femenina en Ameacuterica La emperatriz Isabel de Portugal (Vega 24)

Desde comienzos de la conquista fueron varios los centros docentes regentados por mujeres en los que la ensentildeanza no estaba impartida por monjas Una de las institucio-nes maacutes sobresalientes del sistema educativo fue el Colegio de Nintildeas que se establecioacute en la ciudad de Meacutexico a principios del siglo XVI con maestras que no eran monjas Estas seglares conocidas comunmente como laquomigasraquo eran las descendientes de las antiguas beatas Su ubicacioacuten permanente fue determinada en 1548 lugar que serviriacutea de escue-la ininterrumpidamente hasta 1862 cuando el edificio fue convertido en bodega (Vega 60) No se debe perder de vista que no soacutelo por el hecho de llevar una vida secular se

151ESPANtildeOLAS DE ULTRAMAR EN LA HISTORIA Y EN LA LITERATURA

gozaba de maacutes privilegios Era maacutes bien al contrario En las carreteras las mujeres segla-res no inspiraban el mismo respeto que las monjas que ademaacutes teniacutean contacto cons-tante con personas de los dos sexos no pertenecientes a la Iglesia (Arenal 297) Ademaacutes dentro de las murallas del convento desapareciacutean muchas de las barreras sociales que limitaban a la mujer de esta eacutepoca

La presencia femenina y la monarquiacutea

Pues iquestcoacutemo sabes tuacute preguntoacute don Quijote que los grandes llevan detraacutes de siacute a sus caballerizos Yo seacute lo direacute respondioacute Sancho Los antildeos pasados es-tuve un mes en la corte y alliacute vi que paseaacutendose un se-ntildeor muy pequentildeo que deciacutean que era muy grande un hombre le seguiacutea a caballo a todas las vueltas que daba que no pareciacutea que era su rabo Pregunteacute que coacutemo aquel hombre no se juntaba con el otro sino que siempre anda-ba tras deacutel Respondieacuterome que era su caballerizo y que era uso de grandes llevar tras siacute a los tales Desde enton-ces lo seacute tan bien que nunca se me ha olvidado (Cervan-tes Don Quijote)

Los monarcas espantildeoles fueron conscientes de que sin la presencia femenina difiacute-cilmente se podriacutea solidificar una conquista a todos los niveles La mayor parte de los virreyes y altos cargos trajeron a sus mujeres con ellos y en las ciudades principales de Hispano-Ameacuterica como la ciudad de Meacutexico Guatemala Lima o Potosiacute habiacutea mujeres que disfrutaban de una esmerada educacioacuten (gramaacutetica latiacuten poesiacutea historia muacutesica) Esto dariacutea origen a una elegante y hasta cierto punto sofisticada sociedad en la que las mujeres tomaron parte en asuntos maacutes importantes que los que sus homoacutelogas toma-ran en las colonias portuguesas laquoThere were brilliant vice-regal courts at Mexico City and Lima far exceeding anything that could be found in Portuguese or English America during the seventeenth centuryraquo (Boxer 39) Las estadiacutesticas con las que contamos hoy no soacutelo demuestran que las mujeres llegaron al Nuevo Mundo en respetables porcen-tajes sino que ademaacutes tuvieron una participacioacuten activa llegando a intervenir en algu-nos casos en las liacuteneas de vanguardia Resulta difiacutecil aproximarse al estado de aacutenimo de aquellas mujeres que vivieron en eacutepocas tan lejanas Para ello es necesario indagar en los documentos de la eacutepoca para lograr rescatar del pasado todos esos tesoros de la historia muchas veces tergiversados y manipulados con el fin de que sirvan a propoacutesi-tos actuales Es en los viejos manuscritos donde queda testimoniada su presencia tan rica en dolores tragedias y por queacute no en amores Fue la llegada de estas mujeres una brisa de esperanza y de ilusioacuten para aquellos que ya estaban en las tierras de ultramar y

152 JUAN FRANCISCO MAURA

veiacutean venir de su propia tierra aquello que maacutes antildeoraban amantes madres hermanas Un haacutelito de vida y poesiacutea que suavizaba las costumbres de estos rudos y romaacutenticos pioneros laquoporque para ser hombres de tales empresas algo de romaacutentico debioacute de existir en ellos y que es tan propio del espantildeol y abandonariacutean en brazos tan gentiles sus bruscos modales que habiacutean adquirido en aacutespero contacto en selvas y montantildeasraquo (Villafantildee 125)

Hoy sabemos que en la normativa oficial de la Espantildea del siglo XVI y XVII se favoreciacutea el paso de mujeres al Nuevo Mundo Afirmar lo contrario no solamente es falso sino que implica un desconocimiento total de los primeros dos siglos de la colonizacioacuten espantildeola La presencia de estas mujeres espantildeolas fue efectiva laquolas disposiciones al respecto demuestran claramente que se teniacutea especial intereacutes en su arraigo y que se tra-taba de defender su posicioacuten de mujeres casadas con conquistadores y colonizadoresraquo (Villafantildee 126) Los monarcas comprendiacutean que era praacutecticamente imposible que los hombres viviesen sin mujeres y que de ser asiacute era de esperar que se cometiesen abusos con las indias lo que incidiriacutea en la moral social y en el buen gobierno de la colonia Ademaacutes sin un asentamiento definitivo con hogares y familias difiacutecilmente se podriacutea llevar a cabo una presencia permanente en las nuevas colonias (Orsquo Sullivan-Beare 45)

Empezando por los Reyes Catoacutelicos la preocupacioacuten de que en las colonias se esta-bleciesen nuacutecleos que tuviesen como base la familia cristiana fue clara Las capitulacio-nes que a este efecto se hicieron entre los conquistadores y la Corona fueron nume-rosas La efectuada entre Rodrigo de Baacutestidas y Carlos V puede ser un buen ejemplo Fechada en Valladolid el 6 de noviembre de 1524 muestra el propoacutesito de Baacutestidas de establecer una colonia permanente en la desembocadura del riacuteo Magdalena en el terri-torio que hoy vendriacutea a corresponder a Colombia El documento firmado por el Empe-rador comienza asiacute

El Rey Por cuanto por parte de vos Rodrigo de Baacutestidas vecino de la ciudad de Santo Domingo de la Isla Espantildeola Me fueacute fecha relacioacuten que por servicio de la Catholica Reyna Mi Sentildeora e Nuestro os ofre-ceacuteis de poblar e poblariades la provincia e puerto de Santa Marta que en Castilla de Oro llamada la Tierra Firme e que la poblariades dentro de dos antildeos siguientes haciendo en ella un pueblo en que no menos haya en eacutel al presente cincuenta vezinos que los quince de ellos sean casados y tengan consigo a sus mujeres y que lo teniades fecho dentro de dos antildeos y de hoy en adelante lo maacutes que fuese posible asiacute de cris-tianos espantildeoles como de indios (Restrepo 1 30)

De igual manera el priacutencipe Felipe (futuro Felipe II) en las capitulaciones establecidas en 1547 con Juan de Sanabria para que eacuteste fuese como gobernador y capitaacuten general de la dicha provincia escribe lo siguiente laquoPrimeramente que seais obligado e os obligeis a llevar destos Reynos de Castilla a la dicha provincia del Rio de la Plata cien casados con sus mujeres e hijos para poblar la dicha provincia y con ellos llevareis a vuestra muger e hijos (CDI de Ameacuterica y Oceaniacutea 23 119)

En numerosas ocasiones se pone de manifiesto el apoyo de la monarquiacutea a la emigra-cioacuten femenina tantas que difiacutecilmente se podriacutean enumerar todos los casos Lo cierto es que la legislatura vigente favoreciacutea la emigracioacuten y traslado de mujeres con toda una se-

153ESPANtildeOLAS DE ULTRAMAR EN LA HISTORIA Y EN LA LITERATURA

rie de alicientes137 sobre todo si eacutestas estaban casadas pasaje para llevar a las familias franquicia de derecho para los artiacuteculos que portasen consigo favoritismo en cargos destinos y contrataciones a aquellos que pasasen con sus mujeres incluyendo ademaacutes de los castellanos y leoneses a suacutebditos de otras partes de la corona incluso genoveses y portugueses si estos veniacutean acompantildeados de sus consortes (Fernaacutendez Duro 15-16)

Incluso se llegoacute a imponer penas a aquellos hombres casados que no llevasen a sus mujeres con ellos a Indias en el teacutermino de un antildeo El mismo emperador en una ceacutedula otorgada al virrey de la Nueva Espantildea le recomendaba que laquoprocurase persuadir a ca-sarse a los solteros que estuviesen en edad y situacioacuten de hacerloraquo prometieacutendoles que al efectuar el matrimonio seriacutean preferidos en el reparto de indios En la isla de San Juan de Puerto Rico los cargos oficiales y oficios puacuteblicos debiacutean de ser desempentildeados por los casados en primer lugar En Meacutexico ocurrioacute lo mismo con los cargos de corregido-res (Konetzke laquoemigracioacutenraquo 140-41) Felipe II al igual que sus antecesores y sucesores reiteraraacute y justificaraacute los beneficios de los que seraacuten acreedores aquellos que tengan allaacute a sus mujeres laquoque los que han servido en los descubrimientos de las dichas Indias y tambieacuten los que ayudan a la poblacioacuten dellas que tienen allaacute sus mugeres sean preferi-dos en los aprouechamientos qualesquierraquo mandando que despueacutes de los conquistado-res se tuviera en cuenta para la laquoprovisioacuten de los corregimientosraquo a los colonos casados siempre que estuvieran capacitados para dichos cargos (Konetzke laquoemigracioacutenraquo 141)

Las disposiciones en favor del matrimonio son claras ya sea por medio de un favo-ritismo manifiesto como en los casos antes citados o mediante medidas de cohercioacuten para que esta poliacutetica se llevase a cabo Don Sebastiaacuten Ramiacuterez de Fuenleal obispo de Santo Domingo y presidente de la Audiencia de Meacutexico propuso que a aquellos enco-menderos que no estuviesen casados y que no hubiesen tomado parte en la conquista se les quitase los indios concedidos con la obligacioacuten de devolveacuterselos si en el plazo de un antildeo habiacutean contraiacutedo matrimonio (Konetzke laquoemigracioacutenraquo 142-43) Por supuesto hubo excepciones a estas reglas En algunos casos ni la mujer teniacutea especial intereacutes en vivir junto con su marido en las Ameacutericas ni el marido queriacutea ir a buscar a su mujer pasado el plazo de un antildeo En el presente documento y de forma excepcional las auto-ridades reales protegen a los conyuges para que puedan seguir viviendo separados en continentes diferentes

Nuestras justicias de la ysla de Cubagua e otras qualesquier de las nuestras Yndias yslas e tierra firme del mar oceacuteano e a cada uno e qualquier de vos a quieacuten esta mi ceacutedula fuese mostrada por parte de Alonso de Tapia nuestro veedor de la provincia de Paria me ha sido hecha relacioacuten que ha mucho tiempo que reside en esas partes donde nos ha servido en lo que se ha ofrecido e que agora vos otros le apre-miaacuteis a que venga o embiacutee a estos Reinos por su muger lo cual no puede al presente hazer a causa de no ter posibilidad para ello a mi me ha suplicado vos mandase que no le compeliacuteesedes ny apremiaacutesedes a que viniese o enviase por la dicha su muger y dieacutesedes por libres los fiadores que tenyades para que dentro de un antildeo embiariacutea o verniacutea por

137 Reales Ceacutedulas de los antildeos 1502 y 1503 Academia de la Historia Coleccioacuten Muntildeoz tomo 75 fols 209 y 220 citado por Fernaacutendez Duro 15

154 JUAN FRANCISCO MAURA

ella o como la mi merced fuese lo cual visto por los de nuestro consejo juntamente con una peticioacuten presentada por dontildea Mariacutea Gudiel muger del dicho Alonso de Tapia por la cual nos suplica lo mismo que acor-dado que debiacutea mandar esta mi ceacutedula para vos por la qual vos mando que no compelaacuteis ni apremieacuteis al dicho Alonso de Tapia a que venga ni enviacutee a estos reinos por la dicha su muger si no fuere a que la pro-vea de lo que fuere necesario para su mantenimiento y deys por libres quales quier fianzas que sobre ello haya dado e no fagades ende al por alguna manera Firmado en la villa de Valladolid a VII diacuteas del mes de febrero de mil e quinientos e treinta y siete antildeos yo el licenciado Con-de de Samano y sentildealada del cardenal Beltraacuten y Carbajal [Aparte en letra pequentildea] Este diacutea se despachoacute una provisioacuten por la cuaacutel su Mag hizo merced a Alonso de Tapia de la veedoriacutea de la provincia de Paria por muerte de Garciacutea de Aguilar con las clausulas ordinarias y con el mismo salario que teniacutea Aguilar Firmado del emperador y de Beltraacuten y Bernal y Velaacutezquez El Rey (Registro de disposiciones Riacuteo Marantildeoacuten AGI Indiferente General Legajo 416 libro 2 Fols 94v y 95r)

El punto maacutes interesante a destacar de todas estas disposiciones oficiales en cuanto a la emigracioacuten femenina al Nuevo Mundo no es otro que la libertad que se da a la mujer de decidir si quiere o no casada o sin casar trasladarse al nuevo continente no como una imposicioacuten sino como un precepto laquoel espiacuteritu de las disposiciones en el sentido de asegurar la vida marital de los casados significa que la mujer que su marido invita a pa-sar a las Indias puede negarseraquo (Villafantildee 127) Habriacutea que ver las opciones laquorealesraquo ade-maacutes de las legales y econoacutemicas que le quedaban a la mujer si tomaba esta decisioacuten

El saber la libertad de eleccioacuten que estas mujeres teniacutean de antemano antes de aden-trarse en las interminables penalidades y aventuras que los viajes de la navegacioacuten tran-soceaacutenica suponiacutean hace que sus hechos y esfuerzos cobren auacuten maacutes relieve En nume-rosas ocasiones estas mujeres cruzaron el oceacuteano una y maacutes veces sin otro motivo que el de defender los derechos e intereses de los suyos Lo que resulta maacutes valioso de todo esto es que lo hicieran por propia iniciativa arriesgando sus vidas para que se hiciese justicia y para que no les faltase lo necesario a aquellos que estaban en la otra orilla Las autoridades vigentes conocedoras de los vaciacuteos legales existentes en las nuevas colo-nias se apresuraron a poner en vigor aquellas normas que redundaran en el beneficio de los menos favorecidos por las circunstancias La institucioacuten del matrimonio cuya trans-cendencia es fundamental en la vida juriacutedica y social de la mujer tuvo que ser legislada en Ameacuterica con una serie de nuevas disposiciones agregados modificaciones y aclara-ciones Asiacute pues la legislacioacuten de base espantildeola tuvo que sufrir en tierras americanas esta serie de cambios por motivos poliacuteticos y sociales (Villafantildee 126)

Para hacer un sumario de lo dispuesto hasta el siglo XVI en cuanto a la legislacioacuten de las mujeres que teniacutean familia o intereses en Indias merece la pena mencionar que existieron una serie de disposiciones que protegiacutean a las mujeres para que eacutestas no se viesen abandonadas por sus maridos En un epiacutegrafe de la Recopilacioacuten de 1680 (libro VII tiacutetulo 3) se deja ver claramente la preocupacioacuten de las autoridades en este asunto laquoDe los casados en Espantildea e Indias que estaacuten ausentes de sus mujeres y esposasraquo (Vi-llafantildee 126-27)

155ESPANtildeOLAS DE ULTRAMAR EN LA HISTORIA Y EN LA LITERATURA

La lista de disposiciones se hace interminable En los reinados de Fernando el Catoacute-lico Carlos V Felipe II Felipe III o incluso Carlos II la insistencia es constante La ra-zoacuten de esta insistencia seriacutea bastante obvia dado que con un oceacuteano por medio seriacutean muchos los que se aprovechasen de llevar una doble vida marital sin el estricto control y vigilancia de sus mujeres que se encontraban en la peniacutensula La ley XXVII libro IX tiacutetulo XXVI determina laquoDeclaramos por personas prohibidas para embarcarse y pasar a las Indias todos los casados y desposados en estos reinos lsquosino llevaren con ellos sus mujeresrsquo aunque sean virreyes oidores gobernadores o nos fuesen a servir en cual-quier cargo y oficios de Guerra Justicia y Hacienda porque es nuestra voluntad que todos los susodichos lleven a sus mujeresraquo (Villafantildee 127) laquoLos eclesiaacutesticos eran los en-cargados de dar cuenta a los tribunales competentes de aquellos que estando casados permaneciacutean en Indias sin sus mujeres Son reiteradas las disposiciones de Fernando el Catoacutelico en este sentidoraquo138 En 1514 el rey don Fernando ordena en una provisioacuten para la isla Espantildeola laquodoy licencia eacute facultad aacute cualquier persona naturales de estos Reynos para libremente se puedan casar con mujeres naturales de esa dicha ysla sin tener que incurrir por ello en pena algunaraquo (Villafantildee 129)

No se debe olvidar tampoco a aquellas mujeres que decidieron pasar a las laquonuevas tierrasraquo solteras Estas mujeres tambieacuten tuvieron un papel importante en el desarrollo de las nuevas colonias Los organismos espantildeoles del momento como los mandatarios indianos y todos los cronistas no dejaron pasar desapercibida la importancia social de estas mujeres en la poliacutetica de poblamiento laquo[E]s cierto que los pueblos de Indias nuevamente poblados no se tienen por fijos o estables ni permanentes hasta tanto que mujeres espantildeolas entren en ellos y los encomenderos y conquistadores se casen por muchas causas y respetos buenos y saludables que para ello hayraquo (Villafantildee 126-27)

Si la intencioacuten era la de una presencia permanente en las tierras americanas la mujer soltera que pasase a ellas siempre seriacutea un motivo maacutes para el colono o conquistador de continuar en el mismo suelo Se podriacutea empezar una familia si asiacute se quisiese sin tener que pensar en volver a la metroacutepoli ya fuese a disfrutar de los bienes adquiridos o a laquobuscarraquo una esposa El problema aparecioacute cuando se produjo un exceso de mujeres solteras lo que de alguna manera alteroacute la estructura social existente ya que no habiacutea muchas opciones para ellas aparte del matrimonio o el convento

En consideracioacuten a que la experiencia habiacutea demostrado que un exce-sivo nuacutemero de mujeres ejerciacutea perniciosa influencia sobre la moral y las costumbres se suplicaba al rey no otorgase a aquellas tantas auto-rizaciones para emigrar al Peruacute La ciudad de la Plata fundada en 1538 emite en 1577 un informe en el que se expone la urgente necesidad de que se funde un convento de monjas pues en el territorio de las Au-diencias de Los Charcas existiacutea un gran nuacutemero de muchachas que no pudieacutendose casar se hallaban en gran peligro de perderse (Konetzke laquoemigracioacutenraquo 149)

138 Solorzano Pereira Juan de Libro Primero de la Recopilacioacuten de las Ceacutedulas Reales Cartas y Provisiones y Or-denanzas Reales Noticia preliminar de Ricardo Levenne Universidad de Buenos Aires Facultad de Derecho Y Ciencias Sociales Pub del Instituto de Historia del Derecho Argentino Coleccioacuten de Textos y Documentos para la Historia del Derecho Argentino t V Buenos Aires Imp de la Universidad de Buenos Aires 1945 (Li-bro I Ley 10 laquoQue los Espantildeoles puedan casar con Indias y al contrario a su voluntadraquo t2 p 138 citado en Villafantildee 129

156 JUAN FRANCISCO MAURA

Entristece ver coacutemo se manejan las cifras de estas mujeres como si de ganado o de bienes suntuarios se tratase Por otra parte existieron irregularidades como la de pobla-doras espantildeolas que vivieron amancebadas con hombres que ya estaban casados en la peniacutensula Normalmente esto ocurriacutea cuando la estancia del conquistador se prolonga-ba maacutes de lo debido en lugares donde habiacutea pocas espantildeolas Muchas veces nacieron hijos de estas uniones que hicieron auacuten maacutes difiacutecil la situacioacuten para las mujeres que esperaban en Espantildea a un marido que ya no teniacutea ningunas intenciones de volver En los juicios de residencia los documentos acostumbran a citar estos casos ya que era parte de su obligacioacuten castigar las irregularidades extramatrimoniales y salvaguardar las buenas costumbres familiares que con tanto intereacutes se deseaba mantener laquoUn ejemplo nos lo da la isla de Cuba donde en 1532 viven con hombres casados Olalla Hernaacuten-dez Santillana Aranda lsquola Cordobesarsquo Catalina de Leoacuten Catalina Saacutenchez Francisca Hernaacutendez Mayor de Azebedo Juana de Valeros y lsquouna mujer que estaba en casa de Ayalarsquoraquo (Borges 416)

Estos casos no fueron aislados y mucho menos en Cuba centro neuraacutelgico de todo el movimiento de ida y vuelta entre la metroacutepoli y el Nuevo Mundo Estas ocho acusa-ciones por lo tanto no tienen porqueacute considerarse extraordinarias y menos en el lugar maacutes cosmopolita de las Indias en esos momentos al que llegaban flotas a cada momen-to Al parecer existieron casos parecidos en el Riacuteo de la Plata Peruacute y Nueva Espantildea (Ratcliffe 347) El margen legal para que estas mujeres viviesen como quisiesen estuvo limitado por una moral que veiacutea uacutenicamente en el matrimonio o el convento una salida laquovaacutelidaraquo para que fueran aceptadas socialmente Los hombres en iguales circunstan-cias fueron juzgados por una laquomoralraquo mucho maacutes permisiva

La mujer y el cuerpo eclesiaacutestico

Pues iquestquieacuten diablos os traiacutedo aquiacute dijo don Quijote siendo hombre de la iglesia iquestQuieacuten sentildeor replicoacute el caiacutedo laquomi desventuraraquo Pues otra mayor os amenaza dijo don Quijote sino me satisfaceacuteis a todo cuanto primero os pregunteacute (Cervantes Don Quijote )

Otro factor a tener en cuenta en un anaacutelisis sobre la presencia de la mujer en el Nuevo Mundo es el que tiene que ver con la institucioacuten maacutes importante de las que llegaron desde Europa la iglesia catoacutelica Sin aacutenimo de criticar a tan compleja institucioacuten res-ponsable de gran parte de los aconteceres en el Nuevo Mundo vale la pena analizar algunas singularidades Muchos de sus miembros fueron grandes ejemplos de valor e inteligencia a la hora de tratar los maacutes variados y escabrosos asuntos con los que se encontraron los cristianos en la otra orilla durante este periacuteodo Se debe resaltar tam-

157ESPANtildeOLAS DE ULTRAMAR EN LA HISTORIA Y EN LA LITERATURA

bieacuten su caraacutecter medieval en la manera de hacer apostolado y de entender y tratar a los potenciales cristianos Si se tienen en cuenta los privilegios y prerrogativas que algunas de las altas jerarquiacuteas eclesiaacutesticas tuvieron no seriacutea superfluo estimar que un respeta-ble porcentaje de la poblacioacuten de origen laquodudosoraquo muy bien podiacutea venir de la misma iglesia Fueron muchas las viacutectimas y muchas las familias divididas por un padre laquoinvi-sibleraquo Gran parte de los hijos o laquosobrinosraquo de estos sacerdotes pasaron a ocupar cargos similares incluyendo los privilegios que estos cargos llevaban consigo como si se trata-se de cualquier otro oficio gremial transmitido generacionalmente regla tan comuacuten en la Europa medieval Todaviacutea a finales del siglo XIII en Espantildea los derechos de los hijos y nietos de los sacerdotes estaban protegidos por la ley sin que hubiesen podido ser erradicados por las reformas gregorianas (Ratcliffe 347)139

Las letras espantildeolas ya se haciacutean eco de estos lances amorosos entre representantes de la Iglesia y ciertas damas del lugar desde los tiempos del poeta riojano Gonzalo de Berceo En su obra maacutes conocida Los milagros de Nuestra Sentildeora Berceo describe con un realismo ingenuo y sencillo relatos de humor y de humanismo sobre aquellos hombres de carne y hueso que eran perdonados por la intercesioacuten de la Virgen Mariacutea Juan Ruiz por su lado haraacute de su Libro de buen amor la obra maacutes representativa en este sentido Seriacutea prolijo recordar la actuacioacuten de la Iglesia durante diversos periacuteodos de la Edad Media no soacutelo en Espantildea sino en toda Europa En la Espantildea musulmana del siglo XII concretamente en Sevilla el comportamiento de los representantes de la iglesia cristia-na (mozaacuterabe) en territorio islaacutemico es duramente criticado por el sevillano Ibn Abdun Este precioso documento muestra el estricto control y falta de confianza que existiacutea sobre la mujer prohibieacutendolas que entrasen en las laquoabominablesraquo iglesias cristianas

porque los cleacuterigos [cristianos] son libertinos fornicadores y sodomi-tas Asimismo debe prohibirse a las mujeres francas que entren en la iglesia maacutes que en diacuteas de funcioacuten o fiesta porque alliacute comen beben y fornican con los cleacuterigos y no hay uno de ellos que no tenga dos o maacutes de estas mujeres con que acostarse Han tomado esta costumbre por haber declarado iliacutecito lo liacutecito y viceversa Convendriacutea pues mandar a los cleacuterigos que se casasen como ocurre en Oriente y que si quie-ren lo hagan (Leacutevi-Provenccedilal 150)

Pese a existir una convivencia paciacutefica durante gran parte de la Edad Media entre los tres credos monoteiacutestas de Espantildea (cristianos musulmanes y judiacuteos) esto no suponiacutea que no existiese desprecio y desconfianza entre estos grupos religiosos Dice Abdun resaltando el peligro que suponiacutea que una mujer entrase en casa de un cleacuterigo cristiano de vida ceacutelibe

No debe tolerarse que haya mujer sea vieja o no en casa de un cleacuterigo mientras eacuteste rehuacutese casarse Obliacutegueseles ademaacutes a circuncidarse co-mo les obligoacute al-Mutadid pues si a lo que dicen siguen el ejemplo de Jesuacutes (iexclDios les bendiga y salve) Jesuacutes se circuncidoacute y precisamente ellos que han abandonado esta praacutectica tienen una fiesta que celebran solemnemente el diacutea de su circuncisioacuten (Leacutevi-Provenccedilal 150-151)

139 Valdriacutea la pena ver si han cambiado mucho las cosas desde hace quinientos antildeos a esta parte o si in-cluso la iglesia moderna ha retrocedido en tolerancia en cuanto a las relaciones sexuales de los representantes de la Iglesia

158 JUAN FRANCISCO MAURA

El historiador argentino Germaacuten Arciniegas recoge un pasaje ilustrativo de lo men-cionado anteriormente pero trasladado al ambiente de la colonia diciendo que incluso en poblaciones pequentildeas como Santa Fe con poco maacutes de un convento y una ermita la fragilidad de la carne enredaba a frailes soldados y virreyes por igual laquoEl buen So-liacutes que murioacute en olor de santidad con la cabeza reclinada sobre un par de ladrillos y en saya de franciscano cruzaba en las noches el solar de su palacio para ir a besar a la Marichuelaraquo (118-19)

Arciniegas recoge tambieacuten un suceso aparecido en el diario de Lima en 1667 que no tuvo que ser extraordinario durante los primeros antildeos de la colonia laquoEl fraile carmelita mdashGrande hereje y siendo sacerdote deciacutea misa gran perro lujurioso deshonesto que relatando sus maldades dijo que en cierta ciudad habiacutea conocido carnalmente a maacutes de trescientas y sesenta mujeres y en un convento de monjas habiacutea cometido muchos sacrilegios Este lo trujeron preso de Buenos Aires por Chileraquo (119)

Las controversias de la iglesia moderna sobre las relaciones que los eclesiaacutesticos de-ben tener con el sexo femenino parece que no han encontrado todaviacutea respuesta Sigue existiendo miedo y recelo a que la mujer comparta no soacutelo poder en la jerarquiacutea de la iglesiacutea sino en la vida privada de los miembros de la institucioacuten En la Nueva Espantildea el primer obispo de Meacutexico Juan de Zumaacuterraga viendo en la mujer un ser de tentacioacuten irresistible prohibioacute terminantemente la presencia de eacutestas en su casa Ni siquiera para su limpieza y aseo El franciscano Juan de Torquemada se refiere a este comportamien-to como una de las virtudes del popular obispo

Fue este benditiacutesimo prelado muy amigo de la virtud y de virtuosos y aceacuterrimo reprehendedor de vicios y viciosos y tan enemigo de la ociosidad que no permitiriacutea que alguno de su casa estuviese ocioso fue amiciacutesimo de la limpieza por lo cual jamaacutes consintioacute que mujer alguna entrase en su casa aunque fuese necesaria al servicio de ella ni nunca consintioacute que por alguna ocasioacuten subiese mujer a lo alto y aposentos de ella antes lo teniacutea todo cerrado como un monasterio porque sabiacutea (como quien tambieacuten sabiacutea) que la ocasioacuten suele derribar los maacutes fuertes y robustos corazones (450 lib 20 cap 31)

No fueron uacutenicamente miembros de la iglesia catoacutelica los que valoraron la lucha con-tra la tentacioacuten siguiendo al pie de la letra el crudeliacutesimo refraacuten laquoentre santa y santo pared de cal y cantoraquo Se tienen algunas noticias de la vida social de los primeros tiem-pos de la colonia En estos documentos se puede observar coacutemo no distaban mucho las oacuterdenes que se dictaban en la metroacutepoli y las que se llevaban a cabo en la Nueva Espantildea La vida social tanto de damas como de algunos miembros de la iglesia de las colonias era maacutes laquorelajadaraquo de lo que las normas permitiacutean Gracias a la informacioacuten ofrecida por Manuel Romero de Terreros disponemos de los nombres de las primeras virreinas

Las esposas de los primeros cinco Virreyes Don Antonio de Mendoza Don Luis de Velasco Don Gastoacuten de Peralta Don Martiacuten Enriacutequez de Almanza y Don Lorenzo Suaacuterez de Mendoza Conde de la Coruntildea fueron respectivamente Dontildea Caterina de Vargas Dontildea Ana de Cas-tilla y Mendoza hija de Don Diego de Castilla Sentildeor de Gor y Caba-

159ESPANtildeOLAS DE ULTRAMAR EN LA HISTORIA Y EN LA LITERATURA

llerizo de Carlos V Dontildea Leonor de Vieo Dontildea Mariacutea Manrique hija del Marqueacutes de Aguilar y Dontildea Catalina de la Cerda hija del segundo Duque de Medinaceli (Romero 2)

Existen noticias concretas de la seacuteptima virreina de la Nueva Espantildea (1586) dontildea Blanca de Velasco marquesa de Villamanrique En ellas destaca lo anteriormente men-cionado sobre la falta de tolerancia existente en aquellos tiempos difiacutecilmente com-prensible si no fuera por fragmentos esporaacutedicos conservados sobre la vida colonial en la Nueva Espantildea En la siguiente Relacioacuten hecha por autores anoacutenimos sobre la visita que hizo Fray Alonso Ponce Comisario General de la Orden Seraacutefica a las provincias de la Nueva Espantildea se mencionan las eneacutergicas medidas que con los miembros de su orden en su opinioacuten de moral laquomuy relajadaraquo tomoacute este religioso Tambieacuten aparecen mencionadas sus relaciones con la Virreina

Captoacutese ademaacutes la enemistad del gobernante y de la Virreina Dontildea Blanca de Velasco hija del cuarto Conde de Nieva sentildeora seguacuten pare-ce de conducta ligera y caraacutecter maacutes que dominante laquoPor este mismo tiempo (septiembre de 1586) fueron el Virey y la Vireyna a holgarse y recrearse en la cibdad de Xochimilco Posoacute con toda su casa dentro de nuestro convento en un dormitorio deacutel y detuacutevose alliacute siete u ocho diacuteas en que los indios les hicieron grandes fiestas aunque les costaron caras porque en una dellas murieron dos o tres dellos con un tiro que se disparoacute y reventoacute y al principal indio de aquella cibdad hirieron muy malraquo (Romero 3-4)

A pesar del riacutegido control eclesiaacutestico y civil que habiacutea en la Nueva Espantildea existieron tambieacuten pareacutentesis en los que incluso miembros de la iglesia y mujeres mdashhumanos al fin y al cabomdash pudieron disfrutar de algunos momentos de regocijo y alegriacutea Con-tinuando con la cita anterior el mismo autor se queja del laquoexcesoraquo de libertad en los frailes que se suponiacutea que teniacutean que profesar una extremada pobreza y no digamos castidad En primer lugar se describen pormenorizadamente la abundancia en el tipo y cantidad de comida de toda clase dulces y vino que se consumieron con largueza y generosidad durante aquellas fiestas Pero lo que maacutes indigna al autor (o autores) fue que llegasen a entrar mujeres en el convento

y aunque todo esto es malo delante de Dios y delante de los hom-bres lo que maacutes mal parecioacute y de que todo el mundo tuvo que mur-murar fueacute la demasiada libertad rotura y disolucioacuten que hubo en en-trar y estar muy de propoacutesito mujeres no soacutelo la Vireyna y las suyas sino otras muchas dentro del dicho convento y andar por las celdas como si fuese cosa profana y como si no hubiera breve apostoacutelico que soacute graves penas y censuras prohibe estas entradas y como si a los frai-les no los comprendiera el dicho breve por admitirlas y no estuviera asiacute declarado y mandado por nuestros estatutos generales de Toledo (Romero 4-5)

La preocupacioacuten por las laquotentaciones de la carneraquo fuera del matrimonio siempre es-tuvo en la mente de los religiosos espantildeoles asiacute como de otras nacionalidades y reli-

160 JUAN FRANCISCO MAURA

giones que intentaban vanamente erradicar algo tan intriacutenseco al ser humano como a cualquier otra especie animal Esta preocupacioacuten se acentuoacute mucho maacutes en el Nuevo Mundo donde muchas sociedades tribales no veiacutean a la mujer como parte integrante de su propiedad privada La razoacuten es obviamente socioloacutegica y ha existido desde el principio de los tiempos en las civilizaciones maacutes primitivas laquoNo desearaacutes a la mujer del proacutejimoraquo El quebrantar este precepto equivaldriacutea a desestabilizar desde su base a la sociedad judeo-cristiana fundamentada en la familia Las penas aplicadas en estas transgresiones seraacuten lo suficientemente severas como para marginar socialmente mdashen el mejor de los casosmdash a aquellos que las pongan en praacutectica Siendo la mujer la encar-gada por la naturaleza de trasmitir la descendencia de la especie su libertad sexual se veraacute limitada por el peligro de quedar embarazada cada vez que ignore tal elemental precepto140

Primeras escritoras del Nuevo Mundo

Contra cuerdos y contra locos estaacute obligado cualquier caballero andante a volver por la honra de las mujeres cualesquiera que sean Cuanto maacutes por las reinas de tan alta guisa y pro como fue la reina Madaacutesima a quien yo tengo particular aficioacuten por sus buenas partes porque fuera de haber sido fermosa ademaacutes fue muy prudente y muy sufrida en sus calamidades que las tuvo muchas (Cervantes Don Quijote)

Fueron varias las escritoras que durante los siglos XVI y XVII tuvieron una relacioacuten di-recta o indirecta con el Nuevo Mundo Muchas de ellas eligieron la vida monaacutestica mdashen algunos casos como refugio huyendo de sus maridosmdash uacutenica salida en una estructura social en donde no eran muchas las opciones especialmente en una eacutepoca donde el fac-tor religioso pesaba casi tanto como el econoacutemico pero sobre todo para dedicarse a una vida espiritual difiacutecilmente alcanzable en otras circunstancias Mariloacute Vigil apunta que las monjas que lo eran por su propia voluntad ademaacutes de tener inquietudes religiosas tambieacuten las teniacutean intelectuales como es el caso de la escritora miacutestica espantildeola Santa Teresa de Jesuacutes (1515-1582) que ademaacutes de tener una de las vidas maacutes interesantes que se conozcan supo sacar tiempo para escribir las maacutes bellas manifestaciones de la poesiacutea liacuterica y sobre todo de la prosa castellana (Vigil 237-38) Cada una de estas mujeres de-dicadas a la vida literaria y espiritual de su tiempo se merece muchiacutesimo maacutes espacio del que se les pueda ofrecer en estas pocas liacuteneas No obstante con estas pasajeras men-

140 Aunque afortunadamente las cosas han cambiado para la mujer no se debe dejar de mencionar la can-tidad de abusos sexuales de la que es viacutectima en la sociedad moderna

161ESPANtildeOLAS DE ULTRAMAR EN LA HISTORIA Y EN LA LITERATURA

ciones se espera al menos incluirlas y poder despertar el suficiente intereacutes para que sus vidas y sus obras no sigan sumergidas en las simas del olvido Para que estas mujeres de la iglesia pudiesen satisfacer su curiosidad cognoscitiva era necesario romper todas aquellas barreras que supusiesen un estorbo o una restriccioacuten a la hora de investigar consultar o hablar con cualquier persona religiosa de cualquier orden o secular ya fue-se obispo o cleacuterigo Las posiciones intelectuales entre las diferentes oacuterdenes religiosas fueron muy dispares como bien es sabido No eran iguales los planteamientos teoloacute-gicos de los dominicos que los de los franciscanos o los de los carmelitas que los de los agustinos o jesuitas Era necesario por lo tanto tener acceso a estas fuentes de informa-cioacuten para poder constrastar las diferencias y hacer valoraciones propias (Vigil 237-38) El escritor espantildeol Caro Baroja destaca el caraacutecter enciclopeacutedico del catolicismo donde se han integrado corrientes y posturas muy dispares que a traveacutes del diaacutelogo daban cierto espacio al creyente con maacutes curiosidad intelectual para que este pudiese compa-rar y valorar las diferentes opciones que se le ofreciacutean (Vigil 237-38)

Varias de estas mujeres intelectuales fueron hijas de conquistadores que aunque na-cidas en suelo americano seguiacutean expresaacutendose en la lengua de sus padres con no me-nos fuerza que sus contemporaacuteneas peninsulares Es cierto que existieron numerosas escritoras en el Nuevo Mundo durante el siglo XVIII algunas dedicadas incluso al estudio de las matemaacuteticas como la mexicana Dontildea Francisca Gonzaga y Castillo Pero para limitar el presente trabajo a los siglos XVI y XVII uacutenicamente se incluiraacuten ejemplos de estos dos siglos

La peruana Josefa de Alarcoacuten publicoacute en 1648 unas liras dedicadas a las Exequias del Priacutencipe Baltasar Carlos

Cifro en capilla breveEl tribunal de la Magestad maacutes graveEn fe de lo que debeA Carlos que en dos mundos no cabe141

El caso de Sor Jeroacutenima de la Asuncioacuten es muy interesante una mujer que tuvo la oportunidad de viajar a Meacutexico y posteriormente a las Filipinas para cumplir con las mi-siones que le habiacutean sido encomendadas por su orden Nacida en Toledo en 1555 en el seno de una noble y acaudalada familia estuvo destinada a recorrer el mundo ofrecien-do sus servicios a todos los necesitados distinguieacutendose por su ardiente caridad laquovien-do que los galeotes eran tratados con dureza excesiva sobre todo cuando los llevaban de un pueblo a otro procuroacute aliviar las penas de aquellos desgraciados y lo consiguioacute en parteraquo (Serrano y Sanz 268 65) Hija del licenciado e ilustre jurista Pedro Garciacutea Yaacute-ntildeez y de dontildea Catalina de la Fuente ingresoacute contra su voluntad en el monasterio de las Clarisas de Santa Isabel de los Reyes (Toledo) el 5 de agosto de 1570 (Trevintildeo 46) hay que decir que eacutesta no seraacute la uacutenica voluntad contra la que tuvo que luchar

Sor Jeroacutenima se embarcoacute para Meacutexico y de alliacute partioacute hacia Manila junto con siete compantildeeras en el famoso laquoGaleoacuten de Manilaraquo que saliacutea anualmente del puerto mexi-cano de Acapulco Su viaje a las Filipinas duroacute un antildeo y tres meses desde su salida de Espantildea tiempo en el que demostroacute un gran valor y determinacioacuten por el soacutelo hecho de

141 Manuel Serrano y Sanz Apuntes para una biblioteca de escritoras espantildeolas desde el antildeo 1401 al 1833 vols 268 269 270 271 Biblioteca de Autores Espantildeoles (Madrid Atlas 1975) 268 19

162 JUAN FRANCISCO MAURA

embarcarse en tan precarias naves Fue la primera misionera de Oceaniacutea muriendo en Manila en 1621 Alliacute fundoacute el monasterio de Santa Clara que perviviriacutea hasta ser bom-bardeado en la Segunda Guerra Mundial (Trevintildeo 47) Escribioacute su Vida donde trata de la fundacioacuten del convento y de todas las tribulaciones mdashllegoacute a ser excomulgadamdash y satisfacciones que una vida dedicada a una causa justa proporciona Tambieacuten escribioacute una obra de caraacutecter filosoacutefico-teoloacutegico titulada Carta de marear en el mar del mundo nombre alegoacuterico que da cuenta de la enorme distancia recorrida a traveacutes del laquomar del espiacuterituraquo por sor Jeroacutenima He aquiacute algunos de sus versos de caraacutecter religioso

Vuestra soy para vos naciacuteiquestQueacute mandaacuteis hacer de miacute Inaccesible grandezaEterna Sabiduriacuteay bondad del alma miacuteaDios un ser poder y Altezamirad la suma pobrezade eacutesta que se ofrece aquiacuteiquestQueacute mandaacuteis hacer de miacute (Serrano y Sanz 268 66)

Ya en Meacutexico tenemos otro ejemplo de una mujer dedicada por completo a Dios y al estudio y composicioacuten de obras de caraacutecter teoloacutegico Dontildea Ana Mariacutea del Costa-do de Cristo nacida en la ciudad de Tlaxcala hacia el antildeo 1650 Tomoacute la orden de San Francisco para consagrarse a las labores de su orden y a la escritura Se dice que con los escritos de Dontildea Ana Mariacutea se podriacutean formar veinte tomos (Serrano y Sanz 268 282) Estas son algunas de sus obras Vida y muerte de Jesucristo Nuestro Sentildeor Vida del Seraacutefico Padre San Francisco de Asiacutes Vida de la iacutenclita Virgen Santa Clara Vida del sutiliacutesimo doctor Juan Duns Escoto

Pero no todas las monjas tuvieron vidas tan dedicadas al estudio y la oracioacuten Loacutegica-mente entre un nuacutemero tan grande de mujeres existioacute de todo y seriacutea un error pensar que todos los conventos femeninos estaban integrados por laquocaacutendidas palomasraquo Una monja en el siglo XVI y XVII teniacutea mucha maacutes fuerza que una mujer ordinaria ya que actuaban en grupo y la entrada a los recintos donde viviacutean estaba permitida solo a mu-jeres Esta situacioacuten las haciacutea mucho maacutes fuertes a todos los niveles que una mujer sola protegida uacutenicamente por su familia laquoLas monjas durante los siglos XVI y XVII lucharon por eludir la clausura y por zafarse del control que los frailes de las secciones masculi-nas de sus congregaciones ejerciacutean sobre ellasraquo (Vigil 230) Soacutelo un antildeo maacutes tarde que dontildea Ana Mariacutea del Costado de Cristo en 1651 y a 12 leguas de Meacutexico nacioacute la sin par Sor Juana Ineacutes de la Cruz hija de don Pedro Manuel de Asbaje natural de Vergara (Vizcaya) y de Dontildea Isabel Ramiacuterez de Santillana hija de espantildeoles (Serrano y Sanz 268 289) Por ser sin lugar a dudas la poeta maacutes importante de su tiempo y probable-mente la maacutes conocida del mundo hispano no profundizaremos en ella Su obra es un canto a la inteligencia y el exponente maacutes destacado de la literatura barroca americana tanto en prosa como en verso Destacareacute simplemente que Sor Juana Ineacutes pese a vivir en un sociedad donde no eran excesivas las libertades concedidas a las mujeres tuvo el caraacutecter y la determinacioacuten de dejarnos las maacutes bellas poesiacuteas amorosas que si bien estuvieron enmarcadas en un ambiente religioso como era de esperar por su condicioacuten

163ESPANtildeOLAS DE ULTRAMAR EN LA HISTORIA Y EN LA LITERATURA

pudieron transcender como unas de las maacutes bellas manifestaciones literarias que hoy en diacutea se conservan Fue su agudeza mental sensibilidad y cultura tal que no fueron suficientes los soacutelidos muros del convento para contener el genio de tan extraordinaria mujer Recordemos sus conocidiacutesimos versos en defensa de las mujeres

Hombres necios que acusaacuteisa la mujer sin razoacutensin ver que sois la ocasioacutende lo mismo que culpaacuteis142

Las metaacuteforas y la delicadeza que emplea en rebatir a su obispo en su laquoRespuesta a sor Filotea de la Cruzraquo no son solamente el epiacutetome del feminismo de su tiempo sino una de las maacutes brillantes manifestaciones del barroco hispano Poesiacutea teatro ensayo y un conocimiento extraordinario de las ciencias claacutesicas de su tiempo hacen de esta mujer un ejemplo extraordinario de las letras universales Ya son cientos los artiacuteculos y libros que se han escrito sobre Sor Juana y no dejan de aparecer tesis doctorales sobre los maacutes diversos temas conectados con la citada autora143 Como nos dice Stephanie Merrim en su documentada obra Early Modern Womenrsquos Writing and Sor Juana Ineacutes de la Cruz

She wrote and published on secular themes as atypical for a nun as human love Her remarkably extensive writings essayed and reenacted most of the (male) poetic dramatic theological and even philosophi-cal discourses of her times in the metropolis making her works a com-pendium of baroque culture in its diversity and syncretism Sor Juana self-creation as a learned women effectively toppled many of the walls in which she was materially enclosed and positioned her within the dynamic world of early modern European culture (xii)

No se debe dejar de mencionar a otras escritoras novohispanas de la eacutepoca que aun-que no fueron tan proliacuteficas y relevantes como Juana Ineacutes de la Cruz dejaron testimo-nio de algunos acontecimientos que tienen intereacutes socioloacutegico o testimonial Este es el caso de Dontildea Mariacutea Estrada Medinilla de igual nombre y apellido que la mujer que acompantildeoacute a las tropas de Corteacutes en su primera entrada a Meacutexico Natural de Meacutexico publicoacute toda su obra a mediados del siglo XVII concentraacutendose principalmente en la lle-gada del Marqueacutes de Villena virrey y capitaacuten general de la Nueva Espantildea a la ciudad de Meacutexico en el antildeo 1640 Escrita en octavas reales la obra trata de las fiestas de toros y cantildeas con que se obsequioacute al citado virrey Fue impresa en Meacutexico en 1641 (Serrano y Sanz 269 402)

Mucho maacutes importante para el presente libro es Dontildea Isabel de Guevara que escribioacute en 1556 la carta en que se expone la ayuda que ofrecieron las mujeres en el descubri-miento y conquista del Riacuteo de la Plata No cabe la menor duda de que esta carta es uno

142 Para una mejor comprensioacuten del caraacutecter de esta excepcional mujer veacutease entre los numeros trabajos publicados Fredo Arias de la Canal Intento de psicoanaacutelisis de Juana Ineacutes y otros ensayos sorjuanistas (Meacutexico Frente de Afirmacioacuten Hispanista 1972) 47

143 Veacuteanse entre otros trabajos Octavio Paz Sor Juana Ineacutes de la Cruz o las trampas de la fe Georgina Sabat de Rivers En busca de Sor Juana Margo Glantz Sor Juana la comparacioacuten y la hipeacuterbole Gerard C Flynn Sor Juana Ineacutes de la Cruz Stephanie Merrim Feminist perspectives on Sor Juana Ineacutes de la Cruz Pamela Kirk Sor Juana Ineacutes de la Cruz religion art and feminism

164 JUAN FRANCISCO MAURA

de los documentos maacutes importantes con que contamos en relacioacuten a la aportacioacuten fe-menina en el proceso de la conquista de Ameacuterica Su importancia viene dada por varios factores Primero es uno de los primeros testimonios mdashsi no el primeromdash en donde se expone abiertamente la indispensable colaboracioacuten de las mujeres en el descubrimien-to y conquista de tierras en el Nuevo Mundo laquoQue si no fuera por ellas todos fueran acabadosraquo En segundo lugar la informacioacuten vertida en estas liacuteneas presenta en parte la manera de pensar de una mujer espantildeola en tales circunstancias Extraordinario tes-timonio de primera mano que nos da una idea de lo que significoacute en muchos casos el valor y entrega constantes de muchas de estas mujeres que auacuten a riesgo de perder sus vidas no dudaron en luchar al lado de los hombres por una causa que consideraban laquocomuacutenraquo

La relevancia histoacuterica de dicha carta hace que merezca ser transcrita en su totali-dad

Carta de dontildea Isabel de Guevara a la princesa gobernadora dontildea Juana exponiendo los trabajos hechos en el descubrimiento y conquista del Riacuteo de la Plata por las mujeres para ayudar a los hombres y pidiendo repartimiento

para su marido Asuncioacuten 2 de julio de 1556

Muy alta y muy poderosa sentildeora

A esta provincia del Riacuteo de la Plata con el primer gobernador de ella don Pedro de Mendoza hemos venido ciertas mujeres entre las cuales ha querido mi ventura que fuese yo la una y como la armada llegase al puerto de Buenos Aires con mil quinientos hombres y les faltase el bastimento fue tamantildea el hambre que a cabo de tres meses murie-ran los mil esta hambre fue tamantildea que ni la de Jerusalem se le puede igualar ni con otra ninguna se puede comparar Vinieron los hombres en tanta flaqueza que todos los trabajos cargaban de las pobres mu-jeres asiacute en lavarles las ropas como en curarles hacerles de comer lo poco que teniacutean limpiarlos hacer centinela rondar los fuegos armar las ballestas cuando algunas veces los indios les veniacutean a dar guerra hasta cometer a poner fuego en los versos y a levantar los soldados los que estaban para ello dar arma por el campo a voces sargentean-do y poniendo en orden los soldados porque en este tiempo como las mujeres nos sustentamos con poca comida no habiacuteamos caiacutedo en tanta flaqueza como los hombres Bien creeraacute V A que fue tanta la so-licitud que tuvieron que si no fuera por ellas todos fueran acabados y si no fuera por la honra de los hombres muchas maacutes cosas escribiera con verdad y los diera a ellos por testigos Esta relacioacuten bien creo que la escribiraacuten a V A maacutes largamente y por eso cesareacute Pasada esta tan peligrosa turbunada determinaron subir el riacuteo arriba asiacute flacos como estaban y en entrada de invierno en dos bergantines los pocos que quedaron vivos y las fatigadas mujeres los curaban y los miraban y les guisaban la comida trayendo la lentildea a cuestas fuera del naviacuteo y animaacutendolos con palabras varoniles que no se dejasen morir que presto dariacutean en tierra de comida metieacutendolos a cuestas en los

165ESPANtildeOLAS DE ULTRAMAR EN LA HISTORIA Y EN LA LITERATURA

bergantines con tanto amor como si fueran sus propios hijos Y como llegamos a una generacioacuten de indios que se llaman tinbues sentildeores de mucho pescado de nuevo los serviacuteamos en buscarles diversos modos de guisados porque no les diese en rostro el pescado a causa de que lo comiacutean sin pan y estaban muy flacos Despueacutes determinaron subir el Paranaacute arriba en demanda de bastimento en el cual viaje pasaron tanto trabajo las desdichadas mujeres milagrosamente quiso Dios que viviesen por ver que en ellas estaba la vida de ellos porque todos los servicios del naviacuteo los tomaban ellas tan a pechos que se teniacutea por afrentada la que menos haciacutea que otra sirviendo de marear la vela y gobernar el naviacuteo y sondar de proa y tomar el remo al soldado que no podiacutea bogar y escotar144 el naviacuteo y poniendo por delante a los soldados que no se desanimasen que para los hombres eran los trabajos verdad es que a estas cosas ellas no eran apremiadas ni las haciacutean de obliga-cioacuten ni las obligaba si solamente la caridad Asiacute llegaron a esta ciudad de la Asuncioacuten que aunque ahora estaacute muy feacutertil de bastimentos en-tonces estaba de ellos muy necesitada que fue necesario que las muje-res volviesen de nuevo a sus trabajos haciendo rosas con sus propias manos rosando y carpiendo y sembrando y recogiendo el bastimento sin ayuda de nadie hasta tanto que los soldados guarecieron de sus fla-quezas y comenzaron a sentildeorear la tierra y adquirir indios e indias de su servicio hasta ponerse en el estado en que ahora estaacute la tierra He querido escribir y traer a la memoria de V A para hacerle saber la ingratitud que conmigo se ha usado en esta tierra porque al presente se repartioacute por la mayor parte de los que hay en ella asiacute de los anti-guos como de los modernos sin que de miacute y de mis trabajos se tuviese ninguna memoria y me dejaron de fuera sin me dar indio ni ninguacuten geacutenero de servicio Mucho me quisiera hallar libre para me ir a presen-tar delante de VA con los servicios que a SM he hecho y los agravios que ahora se me hacen mas no estaacute en mi mano porque estoy casada con un caballero de Sevilla que se llama Pedro de Esquivel que por servir a SM ha sido causa que mis trabajos quedasen tan olvidados y se me renovasen de nuevo porque tres veces le saqueacute el cuchillo de la garganta como allaacute VA sabraacute A que suplico mande me sea dado mi repartimiento perpetuo y en gratificacioacuten de mis servicios [en el origi-nal del AHN Diversos doc 141 dice ademaacutes mande que sea proveydo mi marido de alguacuten cargo conforme a la calidad de su persona pues el de su parte por sus servicios lo merece] lo merece Nuestro sentildeor acre-ciente su Real vida y estado por muy largos antildeos De esta ciudad de la Asuncioacuten y de julio 2 1556 antildeosServidora de V A que sus Reales manos besa

Dontildea Isabel Guevara

144 Sacar agua de un riacuteo acequia o presa

166 JUAN FRANCISCO MAURA

Sobremdash A la muy alta y muy poderosa sentildeora Princesa dontildea Joana Gobernadora de los reinos de Espantildea etc ndash En su Consejo de Indias (Isabel de Guevara 619-21)

Iroacutenicamente la carta teniacutea que llegar a manos de la desdichada heredera del trono de Castilla e hija de los Reyes Catoacutelicos Juana laquola Locaraquo que habiacutea muerto el antildeo an-terior Son profeacuteticas las palabras de esta mujer no soacutelo porque sus hechos personales quedasen en el olvido sino porque incluso se ha borrado la historia de las mujeres en el Nuevo Mundo negando su presencia Por lo menos Isabel Guevara tuvo acceso a una pluma iquestCuaacutentas seriacutean las que ni siquiera sabriacutean escribir

Otra contemporaacutenea fue dontildea Leonor de Iciz que vivioacute durante la segunda mitad del siglo XVI Interesa sobre todo por los sonetos que escribioacute en elogio de Ercilla soldado que participoacute en la conquista de Chile y que se inmortalizoacute con su obra La Araucana (Serrano y Sanz 269 534) Lo mismo hizo Dontildea Bernarda Lintildeaacuten en 1610 autora de otro soneto en memoria del capitaacuten Gaspar Peacuterez de Villagraacute que participoacute en la conquista de Nuevo Meacutexico (Serrano y Sanz 270 14) Los escritos de estas mujeres tratan de de dos de las eacutepicas maacutes dramaacuteticas de la conquista

En el Peruacute y en pleno siglo XVII aparece otra fundadora de conventos Sor Bernardina de Jesuacutes que ademaacutes fue comparada con Santa Teresa por la semejanza de sus laquocartasraquo con las de la santa de Avila Fue fundadora del convento de Tacunga en Quito maacutes tarde destruiacutedo por un terremoto Dice Serrano y Sanz con respecto a su biografiacutea un tanto legendaria que fue carmelita descalza de Lima y hermana de Dontildea Mariacutea Benavides y Esquivel abuela de D Pedro de Peralta Barnuevo (Serrano y Sanz 269 553) Dicen que esta santa se alimentoacute durante treinta antildeos con laquochochos y caacutescaras de naranja hecho tan raro como increiacuteble Cuando fallecioacute reparaban las monjas en ponerle una vara de azucenas porque habiacutea sido casada y aquellas flores aparecieron milagrosamente sobre el cadaacuteverraquo (Serrano y Sanz 269 553)

Otra limentildea del primer cuarto del siglo XVII con reputacioacuten de santa fue Dontildea Luisa Melgarejo En este caso no se trata de una religiosa de oficio sino de la mujer del doctor Juan de Soto La uacutenica diferencia es que dontildea Luisa al parecer teniacutea laquovisiones y reve-lacionesraquo lo que debioacute poner nervioso a maacutes de un miembro del tribunal del laquoSanto Oficioraquo que consideraron sus escritos laquoculpadosraquo De su papel de laquosantaraquo pasa por lo tanto al de laquoposesaraquo o laquoendemoniadaraquo El inquisidor de Lima Gaitaacuten escribioacute un infor-me donde a traveacutes de la opinioacuten puacuteblica y de otras averiguaciones se deciacutea que dontildea Luisa Melgarejo laquomujer santaraquo sabiacutea cuando las almas de los difuntos saliacutean del Purga-torio El diacutea 14 de noviembre de 1623 se decidioacute tomar posesioacuten de todos los cuadernos en los que habiacutea escrito las experiencias de todos sus laquoarrobos suspensiones extasis y revelacionesraquo Estos cuadernos una vez recogidos presentaron toda una serie de al-teraciones borrones adiciones enmiendas incluso diferente letra por lo que despueacutes de haber sido examinados resultaron culpables145 Excelente imaginacioacuten debioacute tener dontildea Luisa Melgarejo la suficiente al parecer para convencer a algunos miembros de la iglesia de que en sus escritos laquohabiacutea algoraquo que mereciacutea la pena Estas cosas ocurriacutean en Lima uno de los centros culturales maacutes importantes de la vida social y poliacutetica en la Ameacuterica espantildeola Lima a comienzos del siglo XVII seguacuten el empadronamiento llevado

145 Serrano y Sanz 270 47 Veacutease J T Medina Historia del tribunal del Santo Oficio de la Inquisicioacuten de Lima (1569-1820) (Santiago Imprenta Gutemberg 1887) Tomo II 34-41

167ESPANtildeOLAS DE ULTRAMAR EN LA HISTORIA Y EN LA LITERATURA

a cabo en 1614 por el marqueacutes de Montesclaros era una ciudad de 25000 habitantes de los que 11000 eran espantildeoles El nuacutemero de religiosos y religiosas llegaba a 1720 (Pittaluga 77)

Se sabe que en la Isla de Santo Domingo durante el siglo XVI nacioacute o al menos resi-dioacute una poeta de ceacutelebre apellido en los aconteceres del Nuevo Mundo Dontildea Elvira de Mendoza de la que se conserva un manuscrito en la Real Academia de la Historia laquoCantares miacuteos que estaacuteis rebeladosraquo Eugenio de Salazar hace un elogio de ella como poeta en un Soneto a la ilustre Poeta y Sentildeora Dontildea Elvira de Mendoza moradora en la ciudad de Santo Domingo (Serrano y Sanz 270 53)

Nacida en Burgos sobre el antildeo 1590 dontildea Luisa de Padilla merece un lugar aparte dentro del grupo de mujeres escritoras de su eacutepoca Por su estilo faacutecil y castizo su no-vedad de pensamientos y su rica erudicioacuten recibioacute el siguiente comentario de Manuel Serrano y Sanz laquoPocas figuras hay en nuestra historia literaria femenil que puedan compararse a esta eminente prosista acaso la maacutes notable de cuantas florecieron en Es-pantildea durante el siglo XVIIraquo (Serrano y Sanz 270 95-96) Este comentario y comparacioacuten deberiacutea ampliarse para que tambieacuten incluyese a laquola historia literaria varonilraquo

Dontildea Luisa fue defensora de la labor que la Inquisicioacuten estaba realizando en la laquolim-piezaraquo de mujeres laquosoldados del demonioraquo que existieron en algunas provincias espa-ntildeolas en aquel tiempo Muchas de las mujeres que combinaban la magia con los po-deres curativos fueron condenadas no solamente por hombres de la Inquisicioacuten sino tambieacuten por mujeres de todas las clases sociales como es el caso de Luisa de Padilla condesa de Aranda En su obra Elogios de la verdad e invectiva contra la mentira preveniacutea contra aquellos que practicaban artes en contra de la religioacuten cristiana La magiacutea negra seguacuten Padilla era la causante de que muriesen casi tantas personas como otras causas naturales habieacutendose descubierto hasta seis mil brujas en Vizcaya y Guipuzcua con-fesando una mujer de un pueblo pequentildeo haber matado con su laquomagiaraquo a ochocientas personas (Perry 31) Eran estos laquomales de ojoraquo y maldiciones seguacuten la autora las causas de que se secasen los pechos de las madres lactantes que se separasen las parejas casa-das y que abortasen las embarazadas (Perry 31)

Si se tiene en cuenta que dontildea Luisa estuvo emparentada con la maacutes rancia aristocra-cia de su tiempo o lo que es lo mismo con algunos de aquellos que en cierta manera dirigiacutean los destinos de Espantildea en aquella eacutepoca (Duques de Lerma Duque de Uceda Marqueacutes de Cueacutellar Conde de Santa Gadea Marqueacutes de Belmonte por citar algunos) se comprenderaacute mejor su identificacioacuten con una institucioacuten que en teoriacutea velaba por la salvaguarda de los valores laquoeternosraquo de una Espantildea destinada a ser la campeona del ca-tolicismo durante los siglos XVI y XVII El padre de dontildea Luisa fue don Martiacuten de Padilla y Manrique extraordinario militar que proboacute su valor contra enemigos moriscos ingle-ses holandeses piratas berberiscos y el renegado genoveacutes Muley Faxad Fue veterano de la batalla de Lepanto donde apresoacute a cuatro galeras y acompantildeoacute con su escuadra a la reina Dontildea Margarita de Austria cuando vino de Geacutenova en 1598 laquoHabiacutea obtenido a 24 de julio de 1587 el tiacutetulo de Conde de Santa Gadea y en 1596 el de Capitaacuten General de la Armada del mar Oceacuteanoraquo (Serrano y Sanz 27095-96)

Por otra parte tambieacuten se sabe que dontildea Luisa participoacute directamente y desde tem-prana edad en la praacutectica de algunas actividades intelectuales como la historia y la arqueologiacutea a la vez que dedicaba su tiempo a virtudes cristianas como la caridad y el socorro de los necesitados (Serrano y Sanz 270 97) Resulta mucho maacutes faacutecil compren-

168 JUAN FRANCISCO MAURA

der la postura ideoloacutegica de esta gran mujer si tienen en cuenta ademaacutes de los factores antes mencionados otros tantos de caraacutecter biograacutefico concernientes a su educacioacuten y matrimonio

Otra escritora fue la mexicana dontildea Mariacutea Casilda Pozo natural de Temestla (Meacutexi-co) Nacida en el mes de abril de 1682 dejoacute escrita su biografiacutea en 16 cuadernos el ma-nuscrito original se encuentra en la biblioteca del colegio de San Gregorio de Meacutexico Fue su confesor el jesuiacuteta Domingo Quiroga que fue quieacuten la incitoacute a escribir su obra (Serrano y Sanz 270 137) Sor Juana de San Antonio aparece a principios del siglo XVII formando parte de un grupo de religiosas espantildeolas que fueron a Manila por la ruta de Meacutexico Ademaacutes de distinguirse por sus cualidades personales su obra interesa por ofrecer informacioacuten testimonial y costumbrista acerca de la forma de vestir de chinos y japoneses (Serrano y Sanz 270 225)

Otra monja esta vez ecuatoriana fue Gertrudis de San Ildefonso Nacida en 1652 profesoacute su vocacioacuten en el convento de Santa Cruz de Quito dejando escrita su vida por mandato de su confesor el padre Martiacuten de la Cruz el cual hizo una biografiacutea laquoen tres gruesos voluacutemenesraquo Gertrudis de San Ildefonso murioacute en 1709 (Serrano y Sanz 270 300) en olor de santidad

Sor Mariacutea Ana Agueda de San Ignacio nacioacute el 3 de marzo de 1695 en la dioacutecesis de la puebla de los Angeles en un rancho del lugar de Santiago Tecaliacute (Serrano y Sanz 270300) Esta monja mexicana escribioacute varias obras durante su vida conventual a lo largo de la cual desempentildeoacute el cargo de priora por muchos antildeos Entre sus obras todas de caraacutecter piacuteo y de laquoamor divinoraquo escribioacute un curioso y laquocopiosoraquo tratado de la Leche virginal de la Soberana Madre de Dios El padre Fr Juan de Villa Saacutenchez hace el siguiente comentario al respecto laquoen que hablando primero en sentido natural de los beneficios que debemos a Nuestra Sentildeora pasa a tratar en sentido miacutestico y alegoacuterico enten-diendo en la leche la doctrinaraquo (Serrano y Sanz 270301) Mexicana fue tambieacuten Sor Petronila de San Joseacute que ejercioacute como abadesa del Real monasterio de Jesuacutes Mariacutea de la ciudad de Meacutexico Escribioacute Vidas de varias religiosas ejemplares obra que tiene su im-portancia ya que al parecer laquoDe esta obra se sirvioacute D Carlos de Siguumlenza y Goacutengora para escribir su Parayso Occidental (Meacutexico 1684) seguacuten eacutel mismo declara en el proacutelogo diciendo lsquoa quien si hay algo bueno en esta historia se le debe todorsquoraquo (Serrano y Sanz 270 354) Menos conocida fue su compatriota Sor Luisa de Santa Catalina natural de Xacona laquopueblo situado en las inmediaciones de Zamora (Meacutexico)raquo siendo bautizada en 1682 Escribioacute Cartas espirituales a su confesor el P Juan Loacutepez de Aguado (Serrano y Sanz 270 361-62)146

Todos estos escritos la mayoriacutea de ellos ignorados por el gran puacuteblico tienen la im-portancia de darnos una perspectiva diferente En otras palabras ensentildearnos la maacutes refinada sensibilidad de muchas mujeres que permanecieron y en su mayoriacutea siguen permaneciendo a laquooscurasraquo de una eacutepoca tan rica de la literatura espantildeola como fue el Siglo de Oro Este siglo fue tambieacuten en su dimensioacuten literaria y artiacutestica patrimonio de la mujer

146 Para profundizar en muchas de estas escritoras hispano-americanas la consulta de la Biblioteca Hispano-Americana de Beristain de Souza resulta de capital importancia

169ESPANtildeOLAS DE ULTRAMAR EN LA HISTORIA Y EN LA LITERATURA

Sor Nada ardores divinos de una monja adolescente escritos ineacutedi-tos de una recieacuten profesa del siglo XVI147

iexclQueacute encantadores son tus amores hermana miacutea espo-sa iexclQueacute deliciosos son tus amores maacutes que el vino Y el aroma de tus perfumes es mejor que el de los baacutelsamos Miel virgen destilan tus labios esposa miel y leche hay en tu lengua y el perfume de tus vestidos es como aroma de incienso (Cantar de los Cantares 4 10-11)

Sor Nada llamada asiacute por humildad seguacuten dice el Indice de manuscritos de la Biblio-teca Nacional de Madrid es uno de los ejemplos maacutes desconocidos e interesantes que tenemos de la poesiacutea y prosa amoroso-religiosa del siglo XVII Hasta la fecha nunca se habiacutea publicado su obra e incluso hasta el antildeo 1995 para mi sorpresa no habiacutea copias microfilmadas de sus manuscritos en la Biblioteca Nacional Serrano y Sanz en su libro Apuntes para una Biblioteca de Escritoras Espantildeolas hace una escueta y pasajera mencioacuten de esta mujer y de su obra (68-69) siendo eso todo lo que hasta ahora se sabiacutea de ella Sus escritos consisten en los siguientes manuscritos

1 laquoEn queacute consiste un verdadero amor de Diosraquo 9 hojas uacutetiles en 4ordm letra del siglo XVII Biblioteca Nacional de Espantildea Manuscrito 1295926

2 laquoPintura del Propio Amorraquo laquoPintura del propio Amorraquo 10 hojas uacutetiles en 4ordm letra del siglo XVII Biblioteca Nacional de Espantildea Manuscrito 1295927

3 laquoEsplicacioacuten sobre en queacute consiste la paz del Almaraquo laquoQuartillas aacute un Alma que padece soledad interiorraquo 7 hojas uacutetiles en 4ordm letra del siglo XVII Biblioteca Nacio-nal de Espantildea Manuscrito 1295828

En cuanto a su persona soacutelo se nos dice que laquose encubrioacute con este seudoacutenimo laquoSor Nadaraquo Esta monja desconocida de origen hispanoamericano posee toda la frescura e ingenuidad de una joven apasionada metida por vocacioacuten u obligacioacuten a ejercer la profesioacuten maacutes comuacuten para mujeres de cierta clase social de su tiempo En sus liacuteneas podemos encontrar un misticismo simple incluso en algunos momentos infantil pero a su vez lleno de una fuerza y sensualidad interior poco comuacuten en escritos de este geacute-nero que desborda los liacutemites del laquoamor divinoraquo a traveacutes de los diaacutelogos entre el Alma y el Esposo Sor Nada consigue proyectar su amor a Dios maacutes allaacute de una experiencia romaacutentica Su experiencia es sincera y genuinamente miacutestica trascendiendo la imita-cioacuten o la propia creacioacuten poeacutetica ficcionalizada (Hatzfeld 30) Algunos pasajes son de un

147 Veacutease mi artiacuteculo Sor Nada ardores divinos de una monja adolescente escritos ineacuteditos de una monja profesa del siglo XVIIraquo Espeacuteculo Revista de estudios literarios 26 (2004) 1-10 Universidad Complutense de Madrid http wwwucmesinfoespeculonumero26sornadahtml

170 JUAN FRANCISCO MAURA

alto contenido eroacutetico con sustantivos y metaacuteforas que recuerdan la maacutes iacutentima unioacuten amorosa en unos casos y el tierno amor maternal en otros

[T]e miro Jesus mio desnudo a las inclemencias del tiempo y ardien-do en puro fuego de Amor por la salud de las Almas y me ensentildeas a que te ame con todo mi corason y puresa de espiritu No atendiendo ni buscando umanos intereses ni a solisitar consuelos ni regalos espi-rituales que suelen empantildear la puresa del noble corason No mi Jesus amable pues antes me ensentildeaste tu puro Amor que desnudo sean [sic] de encaminar mis passos desde el pesebre asta la cuna en donde te miro tan desnudo como el pesebre y todo Sentildeor por mi Amor (Mss 12959 26 hoja 1 v)

El manuscrito (12959 27) de la mencionada serie de tres contiene algunas correccio-nes quizaacute hechas por el confesor o quizaacute por ella misma cuando se dirige con excesiva familiaridad y arrebatado fervor a su Amado148 He escogido el manuscrito (12959 Caja 28) en primer lugar por ser el ejemplo maacutes representativo de su poesiacutea y prosa En este manuscrito encontramos de forma maacutes directa que alegoacuterica toda la frescura de un diaacutelogo entre Jesuacutes y el alma que raya como diriacutea Cervantes laquoa la llana y sin rodeosraquo (667 lib 2 cap 38) con el doloroso y a veces desesperado deseo de la entrega y la unioacuten final con el Amado La ortografiacutea no ha sido corregida respetaacutendose el texto ori-ginal149 Veamos el siguiente fragmento

Mira que te amo con Amor de padre y con Amor de esposo el mas fino y puro enamorado que no tan solo me presio de darte mi mano sino tambien todo mi cuerpo y sangre para que con mi pan de vida te sustentes y te regales a tus anchuras y que con mi propio espiritu vivas en paz como tu lo deseas y que mis amores sean unico alivio en tus trabajos en esta mortal vida pues si esto es asi y sabes que muero por darte vida dime esposa mia de que te fatigas Dame querida tus bras-sos y dime si me amas como yo te amo (Hoja 4)

148 La antologiacutea de Promis ha procurado insertar entre los textos antoloacutegicos algunos que se refieren a la es-critura de mujeres fundamentalmente de aquellos generados en el interior de los espacios conventuales Estos textos se fundan como laquohistorias de vidasraquo y responden casi siempre a los requerimientos de los confesores de las monjas coloniales En este sentido resulta valiosiacutesima la incorporacioacuten de la llamada Relacioacuten autobiograacute-fica de Sor Ursula Suaacuterez como una muestra significativa de la escritura monjil entendida en esta eacutepoca (como tambieacuten en la tradicioacuten europea medieval) inserta en las denominadas laquolabores de manoraquo de las religiosas ya que el texto escrito por mandato se convertiacutea en una suerte de entramado o tejido linguumliacutestico es decir en un nuevo bordado que la mayor parte de las veces el confesor convertido en censor iba haciendo tachando y enmendando En la antologiacutea Promis agrega un texto de Sor Tadea Garciacutea de la Huerta titulado Relacioacuten de la inundacioacuten que hizo el riacuteo Mapocho de la ciudad de Santiago de Chile en el monasterio de Carmelitas titular de San Rafael el diacutea 16 de junio de 1783 se trata de un poema tipo romance escrito en versos octosilaacutebicos y que da cuenta de lo sucedido ese diacutea en el convento (Resentildea de la literatura del reino de Chile de Joseacute Promis Eddie Morales Pintildea httpwwwupaclpublicaciones2002literatura_promishtm)

149 Son frecuentes las faltas ortograacuteficas Una de ellas es el uso constante del seseo La ausencia de acentua-cioacuten y puntuacioacuten exceptuando alguacuten punto o coma arbitrario no seguido casi nunca de mayuacutescula inicial lo mismo que el uso igualmente aribitrario de la h o de b v r q g j m n x etc No olvidemos de la misma forma la laxitud linguumliacutestica existente en el siglo XVII (no sabemos a queacute parte de eacuteste pertenece el manuscrito) asiacute como la joven edad de la monja

171ESPANtildeOLAS DE ULTRAMAR EN LA HISTORIA Y EN LA LITERATURA

Los versos del presente manuscrito poseen la misma fuerza que tiene su prosa Con una estructura estroacutefica indefinida estaacuten aparentemente corregidos por alguien que tu-vo la oportunidad de conocer personalmente a la autora Muy probablemente se trate del padre al que hace referencia al principio del primer manuscrito laquoMandame el Pd que le declare en que consiste un verdadero amor a Diosraquo a continuacioacuten continuacutea con su caracteriacutestica humildad laquo[O]bedesere y dire lo q Dios me inspire segun mi rudesa y simplisidadraquo (Mss 12959 26) En cuanto a la fuerza pasional de esta joven observamos con cierta tristeza coacutemo aparece sublimada en sus escritos con toda la enegiacutea de una joven mujer llena de intensidad y vida pero encerrada en los liacutemites de un convento Veamos un ejemplo en donde responde el Alma en los siguientes versos

O mi enamorado Jesus O mi dulse y tierno amanteO alegria de los sielos O dulse Jesus amable

(Toda Sentildeor me derrito toda Sentildeor me desagoy quiero vivir por ti ea sentildeor abrasadme) [Tachado en el original]

Toda Sentildeor me derrito toda Sentildeor me desagoy quiero morir por vos ea Sentildeor que ya acabo

Ya tus amores me llaman ya tus perfumes me traencon suspiros y agonias Sentildeor hasta que te alcanse

O mi Jesus amoroso no puedo mas dilatarmeya la pasiensia me falta dulse Jesus abrasadme

(No puedo vivir sin vos no puedo mas dilatarmeya la pasiensia me falta dulse) [Tachado en el original]

No puedo vivir sin vos mi dulse Jesus amablepues me teneis echisada siendo mi esposo y mi Padre

Ay que me abraso Ay que me quemo del Amor deJesus nasareno como no tocan y tantildeen a fuego150

Estos versos llenos de arrebato sublimado conectan con toda la tradicioacuten miacutestica es-pantildeola que se remonta a Ramoacuten Llul y que culmina en el maacutes universal de nuestros

150 En toda la fuerza y simbologiacutea del amor maacutes iacutentimo del maacutes alto y sublime placer de la unioacuten de los amantes tal como lo encontramos en el Cantar de los Cantares y en San Juan de la Cruz Leemos en la Biblia

Ya me he quitado la tuacutenica iquestCoacutemo volver a vestirme Ya me he lavado los pies iquestCoacutemo volver a ensuciarlosMi amado metioacute su mano por el agujero (de la llave) y mis entrantildeas se estremecieron por eacutel Me levanteacute para abrir a mi amado Mis manos destilaron mirra y mis dedos mirra exquisita en el pestillo de la cerradura (5 3-5)

Nos ocurre lo mismo con San Juan de la Cruz en su insuperable poema laquoLlama de amor vivaraquo

iexclOh cauterio suaveiexclOh regalada llagaiexclOh mano blanda iexclOh toque delicadoque a vida eterna sabey toda deuda pagaMatando muerte en vida la has trocado

172 JUAN FRANCISCO MAURA

miacutesticos San Juan de la Cruz Esta tradicioacuten se extiende hasta finales del siglo XVII esto es hasta los finales del Barroco siendo un poco maacutes tardiacuteo en la Ameacuterica espantildeola Sin tener como propoacutesito discutir en el presente trabajo a queacute corriente miacutestica pertenece la obra de Sor Nada es necesario resaltar no obstante el hecho de que estaacute escrito por una mujer y ademaacutes de tierna edad El manuscrito 12959 Caja 26 termina con estas pa-labras laquo[T]odas estas boverias escrivi por entretenimiento siendo resien profesa en la religion Sor Nadaraquo Mas no por la juventud de su autora los escritos dejan de tener lo-gradas metaacuteforas imaacutegenes y siacutembolos sacados de la naturaleza La alegoriacutea de la unioacuten matrimonial poseeacute el fuego liacuterico de la maacutes apasionada de las relaciones amorosas vivi-ficada por perfumes flores insectos animales escarchas nieves o abrojos Por lo tanto aunque la narracioacuten destile cierta ingenuidad no carece por ello de un vocabulario rico con el sabor popular de la poesiacutea de los cancioneros y romances de tradicioacuten renacen-tista No ha sido otra mi intencioacuten que la de rescatar del olvido unos escritos en prosa y en verso llenos de frescura y espontaneidad que nos muestran la pasioacuten con que la joven novicia se laquoentrega en cuerpo y almaraquo a los menesteres de su profesioacuten guiada por un padre espiritual en esos primeros antildeos de formacioacuten Esta ha sido la razoacuten por la que presento a continuacioacuten el citado manuscrito en su totalidad

Sor Nada (Mss 1295928)

laquoEsplicacion sobre en que consiste la paz del AlmaraquolaquoQuartillas a un Alma que padece soledad interiorraquo

[7 hojas utiles en 4ordm letra del siglo XVII]

+

Esplicacion sobre en que consiste la paz del Alma

Pareseme segun mi rudo entender que la verdadera paz del Alma con-siste en una muy pura y buena consiencia en un corason liso y bien intensionado en una verdadera rectitud de espiritu en el qual el Alma procura bolar a Dios sin jamas detenerse a respetos umanos ni reparar en que me diran ni de que me censuraran sino me apresuro a seguir a unos entenderes y pareseres dorados en los quales pretende el mundo engantildear y ensuciar si se puede la puresa de un corason unicamente de Dios y de su Santa ley y se lo conserva cristalino con la divina asis-tencia de la gracia y comprendido de su Amor y temor siguiendo la luz divina de tan amante Sentildeor Dios y ombre verdadero con que este ilustrado corason ni se altera ni se mueve por los disfrasses dorados que ase el mundo y sus moradores mayormente con falssas amistades aunque con ellos muestre buena intension Con la misma grasia y luz de Dios conose el buen corason estos disfrasses que le ase el mundo y se retira de todo con espiritu y valor esto sin la menor alterasion sino que en suma paz se retira a buscar a Dios dentro de su mismo corason

173ESPANtildeOLAS DE ULTRAMAR EN LA HISTORIA Y EN LA LITERATURA

y se abrasa con su pura verdad en la qual se le descubren mil interio-res secretos tan solidos puros y verdaderos que la misma Alma queda abismada y de puro grandes no los puede bien comprender ni esplicar pero estos mismos secretos divinos le sirven de espuelas para no solo correr sino bolar con pies de plumas en seguimiento de su bien ama-do Jesus y como este soberano Sentildeor es tan amante de sus espossas las Almas luego que la ve bolar con pies de plumas la sale al encuen-tro en despoblado campo que se deve de llamar Campo de Amor de Dios y el mismo Sentildeor se viene a las manos por ser Dios que nos ama con Amor infinito de Padre benigno y amoroso con que asiendose en contra deso este divino enamorado en lo interyor de el Alma que le busca con ansias de servirle y amarle y en aquella soledad traban una conversasion amorosa y sensilla como la pluma simple de quien esto escrive

Divino enquentroDios y el Alma en la soledad

O Soberano Principe de la paz dise el Alma tus perfumes me traen a ti bolando porque alla en el mundo y sus valedores me pretendian engantildear y entretenerme con pegaminossas amistades que facilmen-te me pudieran envenenar y matarme apartandome de ti Mi dulse Jesus amable mi Redentor Soberano que con tantas ansias me sales al enquentro como siervo [ciervo] erido de mis Amores los quales tu Amor me ofrese para que con tu mismo Amor te ame y te sirva en paz sin perturbarme ni contristarme ni cansarme de padeser pasando si se ofrese por escarchas nieves espinas ni abrojos ni por otros diverssos trabajos ni piedras de contradision que tu me puedes permitir pues por mas que el mar se levante con sus ferosses olas contra mi ni piedras se me tiren al rostro en todo Sentildeor me quieres con serenidad pasifica sin la menor perturbasion Todo Sentildeor quieres que lo tome con Serenidad de espiritu y asi vengo a ti bolando para que mejor me ensentildees a vivir segun las leyes de tu noble condision que me son muy agradables por mas que el mundo me las despresie por segir sus vanidades y torsidas intensiones con apariensias de bien y con este engantildeo y bien me quie-ro mas a mi que no a mi proximo veo que segun mi pareser se pierden muchas Almas y tambien de aquellos que se depresian y pasan por muy espirituales Con que me paresen pocos los que llegan a padeser con desnudes151 de espiritu por tu purisimo Amor y me parese essas se quedan muy atrasadas en la virtud por el peligro de bolver muy atras el paso de modo que se pueden despentildear y pereser en su misma desgra-sia ya por soberbia o por otras enfermedades que se les pega al corason y asi lo pasan como siegos ignorantes sin advertir en sus peligros

151 La letra en cursiva es miacutea

174 JUAN FRANCISCO MAURA

este aquerdo Sentildeor y otros que tu verdad me ensentildea me ase venir uyendo de las paredes del mundo y me vengo a ti Dios mio bolando con las dos Alas del Amor y temor que tu mismo Amor me ofrese tan de gracia y tan de grado que no se duentildeo mio con que lo responder a tan soberano beneficio y finesa de tus entrantildeas de Amorvengo Sentildeor y esposo mio unicamente a descansar en ti pues los peli-gros del camino me an puesto en mucho sobresalto temiendo el per-derte y sin ti perderme para siempre por una eternidad sin fin pues deseo amado mio ganarme ganandote a ti y vivir en ti aora en vida y despues eternamente y estos cuidados me traen fatigada molida y cansada y no podre tener alivio y descanso sino viendome entre tus brassos aunque sea estando en cruz pues ese es el fin de mis deseos vivir y morir en ti ablame mi cordero manso y ensentildeame a que ver-daderamente te ame como fiel esposa ea mi caro amigo dame la ma-no pues sabes Amor mio que en mi no ay mano sin tu misma mano y asi mi Dios y Sentildeor mi Principe Soberano con umilde rendimiento y deseos de alcansarte te suplico me des la mano y me consueles en estos mis trabajos Deseo Sentildeor vivir en paz y los malos amores de mi Naturaleza flaca no me dejan detentar y no quieren por mi desgrasia atropellar con las leyes de tu Amor ni quisiera perturbar mi corason quando me veo con un torvellino de olas y contratiempos que a menu-do me suelen sercar pero si tu Sentildeor me das la mano nada temo sino que me aseguro y vivire en paz sin que me fatiguen los contratiempos pues mi mano en la tuya y mi espiritu en el tuyo por mas borrascas que me envistan no seran bastantes para rendir mi voluntad a la suya bien si para pronunsiar un fiat que resuene bien atras en tus oidos y que en medio de mis fatigas me ponga a cantar tus divinas misericor-dias hea Sentildeor ya pretendo serrar mis labios por no desir mas bove-rias y deseo Sentildeor oir tus palabras de vida eterna abla Sentildeor que tu sierva oye con atension y cuydado mira mi Dios que se me ase tarde y espero con prisa deseando saborearme y aprovecharme de los ecos de tu Santa dotrina pues todas tus palabras saben a eterna vida callen pues mis sentidos y potensias y todo se ponga en paz pues mi dulse y soberano Sentildeor no se escusara de ablar me aun que en mudo silensio hea mi gran Prinsipe de la paz ablame que tus puros amores me traen perdida por estos asperos montes y mis cortos pasos no te pueden dar alcanse mirame mi Dios a tus pies postrada como un vil gusano y me-nor ormiga de la tierraabla Jesus y dise a su esposa el Alma querida esposa mia que me pides y por que te muestras tan fatigada y mal sufrida no vives como corde-rita del campo buscando de mis pechos el sustancial pasto mi Amor no te sustenta y mi grasia te promete eterna vida pues dime amada de que te fatigas y te muestras mal sufrida mira que te amo con Amor de padre y con Amor de esposo el mas fino y puro enamorado que no tan solo me presio de darte mi mano sino tambien todo mi cuerpo y

175ESPANtildeOLAS DE ULTRAMAR EN LA HISTORIA Y EN LA LITERATURA

sangre para que con mi pan de vida te sustentes y te regales a tus an-churas y que con mi propio espiritu vivas en paz como tu lo deseas y que mis amores sean unico alivio en tus trabajos en esta mortal vida pues si esto es asi y sabes que muero por darte vida dime esposa mia de que te fatigas Dame querida tus brassos y dime si me amas como yo te amoResponde el Alma152 Tu mi Dios sabes si yo te amo pues de mi solo se que mis deseos y ansias buelan a ti mas no alcanso a saber si te amo como tu de-seas ser amado y como desconfio tanto de mi y de mis prosederes falssos temo Dios mio perderme y perderte y asi Sentildeor pues no desechas mis Amores y te muestras tan fino en amarme te pido me ensentildees a vivir segun las leyes de tu pura verdad y fina condisionhija mia dise Dios la prueva de un verdadero Amor consiste en sufrir callar y padeser por mi unico Amor y en todo seguir mis pasos sin ja-mas retroseder por mas fragoso que se muestre el camino pues nunca seran tantas las espinas las escarchas ni las nieves ni los vientos bo-rrascosos que te se ofrescan pasar por mi Amor como los que mi tierno y desinteresado Amor paso por ti y siempre con mis pies descalssos y asi hija y esposa mia muestrate costante en seguir lo perfecto de mis passos pues mi braso fuerte sera en ti y peleara por ti y te sera el todo en tus nesesidades y mi Amor te convertira en dulse y suave lo amargo y molesto a la condision de la carrne

Responde el Alma

O mi enamorado Jesus O mi dulse y tierno amanteO alegria de los sielos O dulse Jesus amable

(Toda Sentildeor me derrito toda Sentildeor me desagoy quiero vivir por ti ea sentildeor abrasadme) [Tachado en el original]

Toda Sentildeor me derrito toda Sentildeor me desagoy quiero morir por vos ea Sentildeor que ya acabo

Ya tus amores me llaman ya tus perfumes me traencon suspiros y agonias Sentildeor asta que te alcanse

O mi Jesus amoroso no puedo mas dilatarmeya la pasiensia me falta dulse Jesus abrasadme

(No puedo vivir sin vos no puedo mas dilatarmeya la pasiensia me falta dulse) [Tachado en el original]

No puedo vivir sin vos mi dulse Jesus amablepues me teneis echisada siendo mi esposo y mi Padre

152 La aparicioacuten de una mayuacutescula al principio de una oracioacuten es algo totalmente arbitrario en este ma-nuscrito dada la libertad ortograacutefica de la autora Como se puede observar en la mayor parte de las veces no es el caso

176 JUAN FRANCISCO MAURA

Ay que me abraso Ay que me quemo del Amor deJesus nasareno como no tocan y tantildeen a fuego

Responde Jesus Hija mia tus simples vozes oygo y aunque resuenan bien a mis oidos pero te deseo mas mansa y pasifica en tus fervores ya sabes que no siempre as de vivir en mantillas ni a los pechos de tu Madre por que es rason que padescas con espiritu fuerte como mu-jer valerosa por que a una esposa del Rey soberano y prinsipe de la paz no le estan bien chiquerias ni fervores de nintildea malcriada y ya es ora que la destete su Madre la Naturaleza y que empesando su nueva vida camine con el favor de mi grasia sigiendo mis passos de eterna vida esto con sus pies descalssos segun mis leyes de Amor puro y desinteresado lo tienen ordenado153 y vivir en paz como lo deje en-cargado a mis apostoles Santos repitiendoles varias vezes Vivir en pas y caridad esto es un vivir en Dios y Dios en el Alma y asi hija mia el Alma que vive en paz vive en mi Como mis cortesanos en el cielo y pues me pides que te ensentildee a vivir segun las leyes de mi condision Repito el desir que te debes mostrar sufrida en todo tiempo y estado sin permitir en tu corason que ni aun los fervores se adelanten con estremos ni ademanes sino atiende y aprende de mi purisima Madre pues siempre la veras si bien lo consideras que mientras vivio en el mundo en todos sus trabajos se mostro firme fuerte costante como piedra diamante Pues mirandome nintildeo entre sus brasos desnudo en el pesebre desnudo y crusificado en los brassos de una cruz En estos y otros passos no se mudo su rostro sino que en suma serenidad y pasifico corason toda se sacrificaba enteramente en los brassos de mi Amor y rendido su corason y voluntad en la de mi eterno Padre por ejemplo te la doy y deseo que aprendas de sus nobles calidades pues te aseguro carisima que las leyes de mi condision y pura verdad todo lo allaras enserrado en el corason de mi purisima Madre sedle fiel y descansaras en paz

+

Quartillas a un alma que padese soledad interior

1Un Alma afligida y tristese ve en un campo desiertay en el su esposo la tieneAtormentada y sedienta

153 Es a traveacutes de estas liacuteneas lo que hace suponer que la autora de este diaacutelogo amoroso entre el Alma y Je-suacutes es novicia esto es laquoque estaacute empesando su nueva vidaraquo En las mismas liacuteneas una vez maacutes se hace alusioacuten al laquodesteteraquo de su vida civil laquoa una esposa del Rey soberano y principe de la paz no le estan bien chiquerias ni fervores de nintildea malcriada y ya es ora que la destete su Madre la naturalesaraquo (fol 5)

177ESPANtildeOLAS DE ULTRAMAR EN LA HISTORIA Y EN LA LITERATURA

2Pendiente se ve en el AyreSolo un hilo la sustentasin tocar el pie en el sueloporque del no tome tierra

3Mirandola esta yto a ytoaquel sol que la atraviesay la enviste con sus rayosmas ella no pestantildeea

4Como sigarra padese y como a tal se atormentabatiendo sus mismas Alasy el corason se atraviesa

5Con penas sustos temoresquando se mira assi mesmasin tener valor en nadaporque es la misma flaquesa

6Pero el Amor de su esposotoda su atension le llevay la pone en un abismopero cubierto en tiniebla

7Desea dar algun bueloy subir con ligeresapero se mira travadacon una fuerte cadena

8Clama suspira y padeseMas del todo se sujetaRindiendo su voluntadA la divina clemencia

9Los enemigos del AlmaCruelmente le asen guerray ella aunque firme y constantelos reselos la atormentan

178 JUAN FRANCISCO MAURA

10de todos modos padeseaunque gosa la asistensiadel divino esposo amadoque en su interior se recrea

11Solo de verla penary con verla tan serenadise resibe mil gustosde su sigarra pequentildea

12Le sabe el mundo a mil yelesy su trato le atormentaviendo en el mil falsedadesque todas saben a tierra

13Para poderse librardeja de correr y buelacon las Alas del Amory el mismo Amor se la lleva

Una vida dedicada a un amor divino un amor que le haraacute llenar un buen nuacutemero de cuartillas dedicadas a tan alta empresa Se desconoce si la vocacioacuten de Sor Nada con-tinuoacute con tanta intensidad el resto de sus diacuteas Ciertamente la vida en el covento no era faacutecil En algunos casos la experiencia era traumaacutetica incluso fatal para algunas de las adolescentes de la Ameacuterica Espantildeola Las reglas del claustro eran severas por varias razones Estas joacutevenes si no teniacutean el permiso de la superiora no podiacutean recibir visitas no podiacutean volver a sus casas su correspondencia era censuraba y no podiacutean salir del periacutemetro conventual Igualmente se levantaban antes del amanecer para oir misa tra-bajaban el resto del diacutea y lo maacutes interesante es que muchas veces esta vida era aceptada por muchas

Page 12: Tercera parte: Mujeres en la vida intelectual - …parnaseo.uv.es/Editorial/Maura/TerceraParte.pdf · La Biblia, por su parte, hace repetidas menciones de la mujer y sobre el comporta-

142 JUAN FRANCISCO MAURA

las que su profesioacuten y su tiempo le obligaban procura dejar claro que la mujer (casada) merece todo el respeto y ayuda que sea posible de su marido

Porque aunque es verdad que la naturaleza y estado pone obligacioacuten en la casada como decimos de mirar por su casa y de alegrar y des-cuidar continuamente a su marido de la cual ninguna mala condicioacuten de eacutel la desobliga pero no por eso han de pensar que ellos tienen licencia para serles leones y para hacerlas esclavas antes como en todo lo de-maacutes es la cabeza el hombre asiacute todo este trato amoroso y honroso ha de ser principio del marido Porque ha de entender que es compantildeera suya o por mejor decir parte de su cuerpo (Fray Luis de Leoacuten 21 cap 3)

En el reciente estudio de Mar Martiacutenez Goacutengora Discursos sobre la mujer en el Huma-nismo renacentista espantildeol se presenta esa posicioacuten ambigua del fraile agustino en refe-rencia a la funcioacuten de la mujer en la sociedad renacentista

Fray Luis se opone a la funcioacuten otorgada en la eacutepoca a la mujer de mera imagen pasiva Sin embargo fray Luis totalmente encardinado en la cultura del Renacimiento es consciente de la imposibilidad de ignorar ciertos presupuestos De ahiacute la frecuencia en la que el autor anima a las mujeres a buscar una laquofamaraquo puacuteblica que soacutelo una voz masculina puede proveerles Si la mujer desempentildea perfectamente su funcioacuten de casada el marido recibiraacute honra haciendo posible para ella ser alabada por los miembros de la comunidad (187)

Ya se ha mencionado a Isabel la Catoacutelica como impulsora de toda la empresa ultra-marina pero es precisamente gracias a su influencia cuando se pone de moda entre di-versas damas de su tiempo mdashsiglos XV y XVImdash la praacutectica de ciertos estudios y ciencias Beatriz Galindo conocida popularmente como laquoLa latinaraquo fue la que ensentildeoacute latiacuten a la reina Isabel Dice Juliaacuten Juderiacuteas en su obra La Leyenda Negra laquoA los hombres se unen las mujeres en este afaacuten de saber y vemos a Dontildea Beatriz Galindo maestra de latiacuten de la Reina a dontildea Luciacutea de Medrano que explicoacute los claacutesicos en Salamanca a dontildea Fran-cisca de Lebrija que desempentildeoacute una caacutetedra de retoacuterica en la Universidad de Alcalaacuteraquo (Juderiacuteas 74)

Nos cuenta Eustaquio Fernaacutendez de Navarrete que a la muerte del ceacutelebre Antonio de Nebrija quien a impulsos de la reina catoacutelica publicase la primera gramaacutetica europea en lengua romance su hija Antonia le supliacutea en las clases de filosofiacutea y retoacuterica en la Uni-versidad de Alcalaacute cuando eacuteste se encontraba ya viejo y enfermo (xcvi)

No existe ninguna razoacuten para pensar que las las mujeres de clases maacutes favorecidas que pasaron al Nuevo Mundo no disfrutaran de los mismos beneficios y libertades que sus homoacutelogas peninsulares Seraacute preciacutesamente uno de los hijos del mismo Antonio de Nebrija el doctor Sancho de Lebrija quien se encargue de dar poder a Antoacuten Pareja sastre para que la obra escrita de su padre tanto en latiacuten como en romance se distri-buya y venda laquoasiacute en Indias como en otras partesraquo (AHPS Libro del antildeo 1536 Oficio IV Fragmento de un libro Escribaniacutea Cristoacutebal Becerra Folio Primer tercio del legajo Fe-cha 31 de diciembre) En cuanto a las clases menos favorecidas la monarquiacutea espantildeola se preocupoacute desde un primer momento de alfabetizar a todos sus suacutebditos hembras y varones incluyendo los naturales de los territorios conquistados

143ESPANtildeOLAS DE ULTRAMAR EN LA HISTORIA Y EN LA LITERATURA

La educacioacuten de los indiacutegenas americanos fue una sincera preocupa-cioacuten de los reyes de Espantildea casi desde el descubrimiento del Nuevo Mundo Entre las primeras instrucciones de los Reyes Catoacutelicos a sus gobernadores de las Islas Antillas figuran las dadas a Nicolaacutes de Ovan-do en 1503 ordenaacutendole levantar en cada pueblo una escuela junto a la iglesia laquoen la que todos los nintildeos que hubiere en cada una de dichas poblaciones se junten dos veces al diacutea para que alliacute el capellaacuten les ensentildee a leer y a escribirraquo (Vega 9-10)

En la obra renacentista de Cristoacutebal de Villaloacuten El Crotaloacuten se ofrecen unas imaacutegenes muy graacuteficas de las mujeres de la eacutepoca y del laquoexceso de libertadraquo que seguacuten el autor en boca de uno de sus personajes disfrutaban Desde el punto de vista antropoloacutegico y social las siguientes liacuteneas ofrecen una buena imagen de la apariencia fiacutesica de las mujeres de su tiempo y de su actitud vista desde la perspectiva parcial del personaje de la obra

Pues aun no pienses Demophon que la vanidad y perdicioacuten destas livianas mujeres se le ha de pasar a Dios sin castigo que yo te oso afirmar por cosa muy cierta y que no faltaraacute Que por ver Dios su disolucioacuten desenvoltura desverguumlenza y poco recogimiento que en ellas en este tiempo hay visto que asiacute viacutergenes como casadas viudas y solteras todas por un comuacuten viven muy suelta y muy disolutas en su mirar andar y meneo muy curiosas y que por la calle van con un cu-rioso paso en su andar descubierta su cabeza y cabello con grandes y deshonestas crenchas muy alto y estirado el cuello guintildeando con los ojos a todos cuantos topan haciendo con sus cuerpos lascivos meneos (Villaloacuten 860-61 vol 2 canto 20)

El pasaje antes citado pese a parecer humoriacutestico en nuestros diacuteas no lo era tanto en la eacutepoca en que fue escrito ya que la visioacuten de la mujer como parte integrante del pa-trimonio del padre o del marido podiacutea de alguna manera poner en juego laquola honraraquo de su posesor Pese a esto se aprecia como la mujer teniacutea cierto margen de libertad que no se limitaba a las caacutemaras de un convento o a una vida totalmente alejada del mundanal ruido En la siguiente cita continuacioacuten de la anterior se puede observar la serie de ac-cesorios y aderezos que las mujeres de la eacutepoca utilizaban en sus vestidos y cuerpos llamando la atencioacuten la complejidad y sofisticacioacuten de los atuendos descritos

Por esta su comuacuten deshonestidad se cierto que vendraacute tiempo en el cual ha de hacer Dios un gran castigo en ellas pelarse han todos sus cabellos hacieacutendolas a todas calvas y seraacute tiempo en que les quitaraacute Dios todos sus joyeles sortijas manillas zarcillos collares ajorcas y apretadores de cabeza Quitarles ha los partidores de crenchas tenaci-cas salsericas redomillas y platericos de colores y todo geacutenero de afei-tes sahumerios guantes adobados sebos y unturas de manos y otros olores Alfileres agujas prendedores Quitarles ha las camisas muy del-gadas y los manteos vasquintildeas briales saboyanas nazarenas y rebo-cinos y en lugar de aquellos sus cabellos encrespados y enrifados les daraacute pelambre y calvez y en lugar de aquellos apretadores y joyeles

144 JUAN FRANCISCO MAURA

que les cuelgan de la frente les daraacute dolor de cabeza y por cinta de ca-deras de oro muy esmaltadas y labradas les daraacute sogas de muy aacutespero esparto con que se cintildean y aprieten y por aquellos sus muy curiosos y suntuosos ataviacuteos de su cuerpo les daraacute siacutelici y desta manera haraacute Dios que lloren su lascivia y desorden y que de su lujuria y deshonestidad hagan grave penitencia Entonces no habraacute quien las quiera por su he-diondez y miseria en tanto que siete mujeres se encomendaran a un varoacuten y eacutel de todas huiraacute menospreciaacutendolas y aborrecieacutendolas como de gran mal (Villaloacuten 860-61 vol 2 canto 20)

Excelente lista de aderezos femeninos de los cuales pocos son reconocibles en nues-tros diacuteas Gran frustracioacuten debiacutea de tener con las mujeres el autor de estas liacuteneas sien-do al parecer muy poco correspondido por estas uacuteltimas La misoginia que aparece en estas liacuteneas refleja cierta ingenuidad La mujer que se nos presenta debioacute de ser bastante atractiva y sofisticada portando una gran variedad de adornos muchos de ellos de origen oriental y de perfumes que poco tendriacutean que envidiar a los de la mujer moderna En Descripcioacuten breve de toda la tierra del Peruacute Tucumaacuten Riacuteo de la Plata y Chile obra escrita en Chile entre 1603 y 1609 por el padre Reginaldo de Lizarraga nacido en Medelliacuten (Espantildea) en 1545 y trasladado a Ameacuterica a los quince antildeos vemos una asombrosa semejanza con la cita anterior En esta obra del padre dominico dedicada al entonces presidente del Consejo de Indias conde de Lemos observamos coacutemo su descripcioacuten de la vestimenta de las mujeres de Lima ofrece notables semejanzas con la escrita unos antildeos antes en Espantildea En su capiacutetulo 51 titulado laquoDe los vestidos de las mujeresraquo dice lo siguiente

Lo que en esta ciudad [Lima] se admira mucho y aun lo que se ha-biacutea de refrenar es los vestidos y trajes de las mujeres son en esto tan costosas que casi no se sabe como lo pueden sufrir sus maridos La soberbia de ellas es demasiada y no sabemos en lo que han de venir a parar plegue a Dios y no sea en lo que pararon aquellas de quien dice Nuestro Sentildeor Porque las hijas de Sioacuten se ensoberbecieron (esto es las ciudadanas) cuando saliacutean de sus casas llevaban las gargantas ex-tendidas los ojos altos a una y otra parte guintildeaacutendolos los pasos muy compuestos el Sentildeor las volveraacute calvas y les raeraacute los cabellos de sus cabezas les quitaraacute sus chapines y jerbillas bordadas las medias lunas rodetes las cadenas y collares de oro las ajorcas los tocados costosos los punzones de oro para partir las crenchas los zarcillos y los olores los anillos y piedras preciosas etc y por los olores seles daraacute muy pes-tilencial olor y por las cintas de oro sogas de esparto etc No creo yo hay en lo descubierto del mundo ciudad en su tanto ni cuatro veces mayor que a tanta soberbia en este particular como esta nuestra ciu-dad [Lima] llegue acueacuterdome que los antildeos pasados maacutes ha de treinta y ocho que llegando un religioso nuestro de Espantildea nacido y criado en Toledo a nuestro convento de esta ciudad cerca de la fiesta de Cor-pus Christi tratando de ella y de la suntuosidad majestad y riqueza que aquel diacutea en Toledo en calles y ventanas se mostraba le deciacuteamos que no nos espantase porque en nuestra ciudad veriacutea coacutemo no le ha-

145ESPANtildeOLAS DE ULTRAMAR EN LA HISTORIA Y EN LA LITERATURA

ciacutea mucha ventaja Toledo Llegoacute la fiesta vio la riqueza que se mostroacute en los vestidos de las mujeres adornos de ventanas altares y calles dijo que la riqueza de Toledo en este diacutea mostrada no haciacutea muchas ventajas a la de esta ciudad Pues es cierto que hay tanta diferencia de entonces ahora en lo que vamos tratando como de vestidos de aldea a vestidos de corte con justo tiacutetulo se podriacutea moderar por los virreyes esta soberbia pero no seacute por queacute no se modera y siacute seacute por queacute ni los maridos no tienen aacutenimo para moderarlo ni los gobernadores tampo-co (Lizarraga 38 lib 1 cap 51)

Seriacutea injusto y exagerado afirmar que los descubrimientos transoceaacutenicos se hicieron por la presioacuten que ejercieron las mujeres sobre sus amantes para que estos les trajesen laquomaacutes raacutepidamenteraquo todo ese laquosin finraquo de delicadezas exoacuteticas de todo tipo que existiacutean en el Oriente Lo que siacute es cierto es que las mujeres fueron grandes consumidoras de perfumes afeites sedas joyas y otros bienes suntuarios siendo muy conscientes de lo que hoy entendemos como laquomodaraquo Martiacuten Fernaacutendez de Navarrete en su indispensa-ble trabajo sobre los primeros viajes transoceaacutenicos Coleccioacuten de los viajes y descubrimien-tos menciona de paso la situacioacuten de algunas mujeres durante el siglo XV Es precisa-mente esta eacutepoca en la cual portugueses y castellanos entran en conflicto por el control de algunas posesiones en las costas africanas

y crecioacute el lujo a tal extremo que aun las mujeres de los menestrales y artesanos se confundiacutean en los vestidos con las de alto linaje y esta-do usando ropas de ricas telas de seda de oro de lana con forros de martas y pieles y con guarniciones de oro plata y aljoacutefar cuyo gasto por ser ruina de las familias se tratoacute de corregir aunque sin efecto en las Cortes de Palenzuela (M Fernaacutendez de Navarrete 75 21)

El mismo autor resalta la importancia que tuvo para el comercio de Castilla el contar con una buena armada que protegiese a los barcos de piratas y otros peligros Gracias a los inventarios que se han conservado del duque de Beacutejar y de don Alvaro de Zuacutentildeiga conocemos el lujo de estos sentildeores en perlas orientales piedras preciosas telas y demaacutes utensilios de gran valor134 Existe una Real Pragmaacutetica de Fernando el Catoacutelico a Diego Coloacuten en donde aparece nuevamente la conciencia que se teniacutea sobre la manera de ves-tir que deberiacutean llevar las damas castellanas

R PRAGMAacuteTICA SOBRE EL VESTIR Y GASTAR SEDA EN LAS IN-DIAS Valladolid 12 de noviembre de 1509 Don Fernando etc A vos Don Diego Coloacuten nuestro Almirante y Gobernador de las Indias del mar Oceacuteano y a otro cualquier mi Gobernador etc Sepades que yo he sido informado de los muchos gastos y costas que se han hecho y facen y se esperan hacer si yo no lo mando proveer y remediar en el vestir y gastar de las sedas y brocados y bordados en la Isla Espantildeola y en las otras islas y poblaciones de las dichas islas del mar Oceacuteano tra-yendo en ello mucho desorden y yo por el amor y voluntad que tengo

134 AGI Indiferente 418 Libro 2 fol 87v Publicada en DH Am Tom 6 paacutegina 191 DIA Tomo 31 pag 470 DIU Tomo 5 paacuteg 166 Seguacuten la RC a Diego Coloacuten fechada a 14 de noviembre de 1509 es la pragmaacute-tica que se guarda en Castilla sobre la manera de vestir (DIU Tomo 5 paacutegina 174)

146 JUAN FRANCISCO MAURA

a esas dichas Indias y a los pobladores dellas y porque deseo que ellas se aumenten y acrecienten por las haber ganado y descubierto por la gracia de Nuestro Sentildeor con nuestra industria trabajo y costa y los po-bladores dellas no hagan sobre lo suso dicho tan excesivos gastos sino pues que van a ellas con deseo y voluntad de se ayudar y aprovechar del oro que por gracia de Nuestro Sentildeor se descubre de cada diacutea se detengan en lo gastar en semejantes cosas para se aprovechar dellos en otras cosas que maacutes les convenga asiacute para sus personas como para sus haciendas y por evitar y excusar lo suso dicho mandeacute lo platicar con algunos de mi Consejo y por ellos visto se halloacute que porque nuestros suacutebditos y naturales que viven y estaacuten en dichas Indias no gasten sus haciendas en semejantes desoacuterdenes y que las conserven y guarden pa-ra sus menesteres y por el bien y el pro comuacuten de todos generalmente mando dar esta mi carta premaacutetica sancioacuten la cual quiero y mando que haya fuerza y vigor de ley bien ansiacute y a tan cumplidamente como si fuese fecha y promulgada en Cortes por lo cual ordeno y mando que en cuanto a mi merced y voluntad fuere ninguna ni algunas personas de cualquier ley estado condicioacuten que sean que estuvieren de morada o vivienda o en otra cualquier manera en la dicha Isla Espantildeola y en las otras islas desas dichas Indias y tierra firme no puedan traer y traigan ropa alguna de brocado ni de seda ni de chamelote de seda ni zarzahaacuten ni tercenel ni tafetaacuten ni vainas ni correas de espada ni en cinchas ni en sillas ni en alcorques ni en cosa alguna ni tampoco puedan traer ni trai-gan bordados de seda ni chapado de plata ni de oro de martillo ni fila-do ni tejido ni de otra cualquier manera pero que las personas que tu-vieren en las dichas Indias bienes asiacute muebles como raiacuteces que valgan hasta la cuantiacutea de mil castellanos que ellos y los hijos que tuvieren de hasta edad de catorce antildeos traigan jubones y caperuzas y bolsas y ribe-tes y pestantildeas de seda de cualquier color que quisieren con tanto que en una ropa no traigan maacutes de un ribete y que no haya en los dichos ribetes y pestantildeas maacutes anchura de cuanto un dedo pulgar y que no se traiga en los ruedos de las ropas y que puedan traer becas de tercenel y de tafetaacuten y de papahigos de camino aforrados en el mismo tercenel y tafetaacuten y ansiacute mismo permitimos que puedan traer de seda las cora-zas y guarnecer las faldas y gocetes y capacetes y baberas y quejotes y traer cojines de seda en la silla de la jineta y que las mujeres de las tales personas que tuviesen bienes en la dicha cuantiacutea de los dichos mil castellanos y sus hijas siendo doncellas puedan traer gonetes y corseacutes y fajas de dos varas de largo de seda y [borradas dos letras por mancha de tinta] mas y de lo de vestir y mudar cuando quisieren y por bien tuvieren quier sea moyil o faldilla o cota o haacutebito u otra cualquier ropa con tanto que juntamente no puedan vestir ni vistan maacutes de una ni les pongan trepas ni tiras de seda ni de brocado ni de oro tirado ni tejido ni relido ni en las ropas de pantildeo pongan cortapisas ni lisonjas ni trepas ni tiras ni otra guarnicioacuten alguna de seda ni de brocado salvo que puedan traer un ribete o pestantildea de seda de anchura de un dedo pulgar asiacute en

147ESPANtildeOLAS DE ULTRAMAR EN LA HISTORIA Y EN LA LITERATURA

las ropas de seda como en las de pantildeo en los ruedos de las faldas y para las costuras y no otra cosa alguna y que no traigan la dicha seda en las guarniciones de las mulas ni en angarillas ni en sillas ni en pantildeos ni en otra cosa alguna y que ansiacute mismo no puedan traer mantillas de seda ni enforradas en seda sopena que l que contrario hiciere pierda las ro-pas que ansiacute trujere vestidas por primera vez y sea repartido la mitad para el juez que lo juzgare y la otra mitad para el juez que lo acusare y por la segunda que pierda la ropa y se parta como dicho es y sean desterrados de la isla donde viviere para dos antildeos y por cuanto algu-nas personas de los que nuevamente destos reinos de Castillaa van a se avecindar y poblar y estar en las dichas Indias y son de honra acae-ce que no llevan tantos bienes que valgan la dicha cuantiacutea de los mil castellanos que mando que tengan los que hubieren de traer seda en la manera que dicha es que a eacutestos tales no se entienda y extienda lo suso dicho y que puedan traer la dicha seda seguacuten y en la manera que dicha es y no maacutes hasta tanto que haya un antildeo que estaacuten en las dichas Indias que corra y se cuente desde el diacutea que llegare fasta ser cumplido y que siacute cumplido no tuviere bienes que valgan la dicha cuantiacutea de los dichos mil castellanos que no puedan traer seda ninguna so la dicha pena de suso contenida la cual mando a vos las dichas nuestras justi-cias y a cada una de vos que esta mi carta y todo lo en ella contenido y cada cosa y parte dello guardeacuteis y cumplaacuteis y ejecuteacuteis por manera que se cumpla y ejecute lo en ella contenido so pena de perdimiento de los oficios y que seades inhaacutebiles para haber otros semejantes y que pagueis la estimacioacuten de la tal ropa que dejardes de ejecutar y para que lo susodicho sea notorio y ninguno dello pueda pretender ignorancia mando que esta mi carta sea pregonada puacuteblicamente por las plazas y mercados y otros lugares acostumbrados desas dichas islas por prego-nero y ante escribano puacuteblico(Konetzke Coleccioacuten 23)135

Tambieacuten se sabe de las joyas que Rodrigo Ponce de Leoacuten marqueacutes de Caacutediz debioacute dar a dontildea Beatriz Pacheco (M Fernaacutendez de Navarrete 75 22) Lo que siacute queda claro es que la navegacioacuten seraacute a partir de estos antildeos la forma maacutes raacutepida e importante para comerciar con aquellos paiacuteses de Oriente que antes soacutelo era posible alcanzar a traveacutes de rutas terrestres Existe un documento muy representativo de este periodo sobre la posesioacuten de joyas de gran valor por parte de miembros de una de las familias maacutes repre-sentativas residentes en Ameacuterica Los protagonistas son en este caso el almirante Diego Coloacuten y su mujer Mariacutea de Toledo Dice el documento que El jurado Antoacuten Bernal y Juana de Hoces su mujer vecinos de Sevilla en la collacioacuten de Santa Cruz reciben de Diego Coloacuten Almirante de las Indias laquoun joyel muy rico de oro de hechura de escudo que tiene en medio una piedra preciosa grande esmeralda e debaxo de la dicha piedra un rostro de aacutengel labrado en el mismo oro esmaltado e a cada lado del dicho rostro una piedra preciosa diamante pura y debaxo una piedra gruesa pendiente que pesa el dicho

135 AGI Indiferente 418 Libro 2 fol 87v Publicada en DH Am Tom 6 paacutegina 191 DIA Tomo 31 pag 470 DIU Tomo 5 paacuteg 166 Seguacuten la RC a Diego Coloacuten fechada a 14 de noviembre de 1509 es la pragmaacutetica que se guarda en Castilla sobre la manera de vestir (DIU Tomo 5 paacutegina 174)

148 JUAN FRANCISCO MAURA

joyel con todo lo susodicho medio marcoraquo Los citados Antoacuten Bernal y su esposa se dan por pagados de todo lo que se les adeudaba y se obligan a su vez a devolver el joyel al Almirante si este les paga en dinero El 23 de agosto de 1530 siete antildeos despueacutes la virreina canceloacute la anterior obligacioacuten y recuperoacute el mencionado joyel (AHPS Libro del antildeo 1523 Oficio I Escribaniacutea Alonso de la Barrera Folio 1173 Fecha 3 de diciembre) En la misma casa del almirante otra mujer Briolanga Muntildeiz su tiacutea materna se obliga a pagar al mercader genoveacutes Batista Catantildeo 22 ducados de oro laquopor cierto raso que le comproacute y habiacutea de ser pagado en el puerto de Santo Domingoraquo (AHPS Libro del antildeo 1509 Oficio V Libro uacutenico Escribaniacutea Francisco Esquibel Folio Primer tercio del lega-jo Fecha 9 de marzo) Dontildea Briolanga recibiacutea cada antildeo para su mantenimiento 100000 maravediacutes del almirante mayor de las Indias por medio de Gaspar Gurricio monje del monasterio de Santa Mariacutea de las Cuevas (AHPS Libro 1510 Oficio XV Libro II Es-cribaniacutea Bernal Gonzaacutelez Vallesillo Folio primer tercio del legajo Fecha 4 de julio) Resulta interesante hacer notar la temprana presencia (1516) de un ingleacutes en Santo Domingo involucrado igualmente en la compra de telas Se trata de laquoNicolas Arnoteraquo residente en Santo Domingo que debe pagar a Mariacutea Caldera mujer del comendador Diego Barbosa el valor de una cama de sargas de colores de Flandes (AHPS Libro del antildeo 1516 Oficio XV Libro II Escribaniacutea Bernal Gonzaacutelez Vallesillo Folio Primer tercio del legajo Fecha 28 de agosto) Sin embargo anteriormente a esa fecha (1514) encontramos a un veneciano casado con una inglesa mucho maacutes ceacutelebre en sus viajes trasoceaacutenicos laquoSevastiaacuten Cavotoraquo capitaacuten del rey don Fernando y vecino de Sevilla136

De forma paralela se observa tambieacuten un cierto desenvolvimiento de la mujer en su medio lo que equivaliacutea a intercambios de informacioacuten a todos los niveles incluyendo por lo tanto el cultural No era extrantildeo que tuviesen libros de comedias a mano y que llegasen incluso a escribir comedias ellas mismas Efectivamente la sospecha de que las damas llegasen a escribir comedias estaba bien fundada Veacuteanse algunos ejemplos Ana Caro Malleacuten de Soto una de las maacutes famosas dramaturgas de la Sevilla del siglo XVII autora de El conde de Partinupleacutes utiliza el tema del amor en sus maacutes diversas variantes fiacutesicas y espirituales como el eje de casi todas sus obras (Perry 57) Este hecho por otra parte indica el favor del puacuteblico ante un tema tan popular Veacutease otro ejemplo

The drama of this period did not present love and marriage as a simple partnership however and many dramatists contrasted laquoprofaneraquo with laquohonestraquo love Feliciana Enriacutequez de Guzmaacuten who wrote Tragicome-dia Los jardines y campos sabeos in Seville in the early seventeenth cen-tury presented the hero Clarisel as the victim of laquopervertedraquo and fickle Belidiana in part 1 so blinded by her beauty that he feels himself laquoin shackles and in chainsraquo (Perry 57)

Pero las damas espantildeolas de esta eacutepoca no soacutelo escribiacutean comedias algunas tambieacuten se aventuraron a escribir tratados cientiacuteficos Uno de estos casos fue el de Oliva Sabu-co de Nantes Barrera que a finales del siglo xvi escribioacute un tratado meacutedico sobre la naturaleza humana advirtiendo que la lujuria podiacutea perjudicar al cuerpo Se basaba en

136 Sebastiaacuten Caboto o laquoSevastiaacuten Cavotoraquo estaba casado con Juana Cavoto vecina que fue de la ciudad de Londres en la parroquia de San Gil (AHPS Libro del antildeo 1514 Oficio I Libro II Escribaniacutea Mateo de la Cuadra Folio 253 Fecha 14 de Septiembre) citado en CFAAPS Vol 3 doc 128 p 37

149ESPANtildeOLAS DE ULTRAMAR EN LA HISTORIA Y EN LA LITERATURA

la presuncioacuten de que la lujuria provocaba que el cerebro emitiese un liacutequido que iba al estoacutemago enfriaacutendolo y debilitaacutendolo interrumpiendo de esta manera las funciones vitales (Perry 58)

Se sabe que en la eacutepoca de Isabel la Catoacutelica habiacutea muchas mujeres estudiantes y que la propia reina las impulsaba a estos menesteres iniciativa que obtuvo sus frutos en las deacutecadas siguientes Ademaacutes de las conocidas novelistas Mariacutea de Zayas y Sotomayor y dontildea Mariana de Carvajal existioacute toda una serie de escritoras de todos los geacuteneros lite-rarios que florecieron a ambos lados del Atlaacutentico y que no solamente llaman la aten-cioacuten por su nuacutemero sino por la calidad de sus obras Algunas de ellas como dontildea Luisa de Padilla condesa de Aranda calificada por Serrano y Sanz como laquola maacutes notable de cuantas florecieron en Espantildea en el siglo XVIIraquo personificaraacuten a la perfeccioacuten a este tipo de mujeres Tambieacuten deberiacuteamos saber cuaacutentas seriacutean las mujeres que escribieron con pseudoacutenimos masculinos

La informacioacuten sobre las diferentes facetas de la vida femenil con que contamos no es abundante A pesar de todo podemos hacernos una idea maacutes clara de la verdadera situacioacuten de la mujer a traveacutes de una nueva interpretacioacuten de los textos tanto de los medievales como de las croacutenicas de los primeros antildeos del descubrimiento y conquista Algunos estudios relativamente recientes surgidos por el intereacutes general que suscita todo lo concerniente a la mujer han ayudado a considerar nuevas perspectivas La eru-dicioacuten moderna estaacute poniendo en tela de jucio los estereotipos tradicionales en cuanto a la pasividad y relevancia femeninas asiacute como al tradicional misogenismo que se atri-buye a la eacutepoca medieval Cada vez estaacute maacutes claro que la existencia de estas mujeres variaba considerablemente seguacuten la eacutepoca posicioacuten social o situacioacuten geograacutefica por lo que hacer valoraciones categoacutericas sobre laquola situacioacuten de la mujerraquo puede llevar a graves equivocaciones (Dillard 9) Es fundamental para comprender a la mujer espa-ntildeola que pasoacute al Nuevo Mundo tener en cuenta las enormes diferencias de todo tipo que existieron en la sociedad castellana y novomundista Un pintoresco ejemplo es el de laquolas tapadasraquo una usanza de origen aacuterabe que se pondriacutea de moda en Castilla poco despueacutes de la toma de Granada por los Reyes Catoacutelicos y que despueacutes pasariacutea al Peruacute Esta tradicioacuten ha perdurado en algunos pueblos de Espantildea hasta relativamente poco tiempo pueblos como Mojaacutecar (Almeriacutea) y Vejer de la Frontera (Caacutediz) son ejemplo de esta costumbre tambieacuten conocida como el de las laquocobijaacutesraquo

Tras la caiacuteda del reino musulmaacuten de Granada en 1492 la corona espa-ntildeola prohibioacute a las mujeres aacuterabes de Andaluciacutea vestir los velos islaacutemi-cos que cubriacutean sus rostros y ocultaban su identidad No era faacutecil des-arraigar esta costumbre tan ancestral y secular y el emperador Carlos asiacute como su hijo el rey Felipe II tuvieron que repetir la prohibicioacuten Cuando finalmente las moras fueron obligadas a abandonar sus velos y a adoptar el chal castellano comenzaron a utilizar la nueva prenda para cubrir sus rostros dejando al descubierto soacutelo uno de los ojos Esta nueva moda en el uso del chal tradicional nos asegura leoacuten Pi-nelo era extremadamente graciosa sensual y atractiva a causa de la belleza exoacutetica de los ojos de las moras Las mujeres cristianas de Granada Coacuterdoba y Sevilla imitaron pronto la nueva moda de llevar el chal y asiacute nacioacute la laquotapadaraquo hispana Desde Sevilla la nueva moda

150 JUAN FRANCISCO MAURA

fue a las colonias de ultramar y tomoacute raices especialmente en el Peruacute (Martiacuten 317-18)

En un reciente estudio sobre la educacioacuten de la mujer en la Ameacuterica virreinal apare-cen algunos ejemplos significativos de mujeres espantildeolas que consagraron gran parte de sus vidas a la tarea docente Dentro del proceso educativo de las espantildeolas que fueron a las Indias destaca el papel de dontildea Catalina de Bustamante Joseacute de Jesuacutes Vega y Ma-riacutea Luisa Caacuterdenas de Vega dicen en su obra Ameacuterica Virreinal La Educacioacuten de la mujer que esta mujer pocos antildeos despueacutes del descubrimiento del Nuevo Mundo se dedicoacute a trabajar en favor de los indios aunque por desgracia su nombre y sus hechos en la labor docente hayan sido ignorados por los historiadores modernos (Vega 12-13)

Son varias las veces que se nombra a Catalina de Bustamante en el citado estudio y varias las fuentes antiguas en que se recoge la presencia de tan distinguida laquomatrona muy honrada y de buen ejemploraquo de la que ya hablaba Zumaacuterraga y sobre la que se hizo un informe enviado a Carlos V describiendo sus actividades en la Nueva Espantildea firmado por cuatro de los misioneros maacutes conocidos de Meacutexico

El informe dice que los franciscanos de Texcoco acababan de cons-truir un nuevo monasterio y cedido el antiguo A una honrada y honesta y muy virtuosa matrona que se dice Catalina de Bustamante para que ende instruyese a las hijas de los sentildeores de la comarcala cual con el favor de Dios y limosnas que don Hernando [Corteacutes] les haciacutea para su sustentacioacuten [teniacutea en esa casa-hogar] hasta trescientas mujeres antes maacutes que menos (Vega 14)

Estas laquocasas-hogarraquo no estaban regentadas necesariamente por monjas sino por lo que llamaban laquobeatasraquo mujeres que sin estar estar sujetas a la autoridad eclesiaacutestica se dedicaban a un laquolucro honestoraquo Llamadas tambieacuten laquobeateriosraquo eran diferentes a los conventos de monjas y constituiacutean las primeras escuelas de la mujer en la Nueva Espa-ntildea (Vega 20-21) Fue gracias al ejemplo de mujeres como Catalina de Bustamante que dedicaron sus vidas a la educacioacuten de los indiacutegenas que existiesen otras continuando su ejemplo Motoliniacutea dice claramente que laquode ese primer encerramiento (el de Texcoco regentado por Catalina) salieron otras honestas y muy virtuosas duentildeas que ensentildeaban a las maacutes menudasraquo (Vega 23)

Pero dontildea Catalina de Bustamante pese a ser una singular mujer y la iniciadora de la educacioacuten de la mujer en Meacutexico no fue un caso aislado corresponde maacutes bien a un patroacuten al que se ajustaron muchas de las pioneras de la Nueva Espantildea que sembraron instituciones de educacioacuten de la mujer En 1530 unos antildeos maacutes tarde aparecioacute una de las grandes protectoras de la instruccioacuten femenina en Ameacuterica La emperatriz Isabel de Portugal (Vega 24)

Desde comienzos de la conquista fueron varios los centros docentes regentados por mujeres en los que la ensentildeanza no estaba impartida por monjas Una de las institucio-nes maacutes sobresalientes del sistema educativo fue el Colegio de Nintildeas que se establecioacute en la ciudad de Meacutexico a principios del siglo XVI con maestras que no eran monjas Estas seglares conocidas comunmente como laquomigasraquo eran las descendientes de las antiguas beatas Su ubicacioacuten permanente fue determinada en 1548 lugar que serviriacutea de escue-la ininterrumpidamente hasta 1862 cuando el edificio fue convertido en bodega (Vega 60) No se debe perder de vista que no soacutelo por el hecho de llevar una vida secular se

151ESPANtildeOLAS DE ULTRAMAR EN LA HISTORIA Y EN LA LITERATURA

gozaba de maacutes privilegios Era maacutes bien al contrario En las carreteras las mujeres segla-res no inspiraban el mismo respeto que las monjas que ademaacutes teniacutean contacto cons-tante con personas de los dos sexos no pertenecientes a la Iglesia (Arenal 297) Ademaacutes dentro de las murallas del convento desapareciacutean muchas de las barreras sociales que limitaban a la mujer de esta eacutepoca

La presencia femenina y la monarquiacutea

Pues iquestcoacutemo sabes tuacute preguntoacute don Quijote que los grandes llevan detraacutes de siacute a sus caballerizos Yo seacute lo direacute respondioacute Sancho Los antildeos pasados es-tuve un mes en la corte y alliacute vi que paseaacutendose un se-ntildeor muy pequentildeo que deciacutean que era muy grande un hombre le seguiacutea a caballo a todas las vueltas que daba que no pareciacutea que era su rabo Pregunteacute que coacutemo aquel hombre no se juntaba con el otro sino que siempre anda-ba tras deacutel Respondieacuterome que era su caballerizo y que era uso de grandes llevar tras siacute a los tales Desde enton-ces lo seacute tan bien que nunca se me ha olvidado (Cervan-tes Don Quijote)

Los monarcas espantildeoles fueron conscientes de que sin la presencia femenina difiacute-cilmente se podriacutea solidificar una conquista a todos los niveles La mayor parte de los virreyes y altos cargos trajeron a sus mujeres con ellos y en las ciudades principales de Hispano-Ameacuterica como la ciudad de Meacutexico Guatemala Lima o Potosiacute habiacutea mujeres que disfrutaban de una esmerada educacioacuten (gramaacutetica latiacuten poesiacutea historia muacutesica) Esto dariacutea origen a una elegante y hasta cierto punto sofisticada sociedad en la que las mujeres tomaron parte en asuntos maacutes importantes que los que sus homoacutelogas toma-ran en las colonias portuguesas laquoThere were brilliant vice-regal courts at Mexico City and Lima far exceeding anything that could be found in Portuguese or English America during the seventeenth centuryraquo (Boxer 39) Las estadiacutesticas con las que contamos hoy no soacutelo demuestran que las mujeres llegaron al Nuevo Mundo en respetables porcen-tajes sino que ademaacutes tuvieron una participacioacuten activa llegando a intervenir en algu-nos casos en las liacuteneas de vanguardia Resulta difiacutecil aproximarse al estado de aacutenimo de aquellas mujeres que vivieron en eacutepocas tan lejanas Para ello es necesario indagar en los documentos de la eacutepoca para lograr rescatar del pasado todos esos tesoros de la historia muchas veces tergiversados y manipulados con el fin de que sirvan a propoacutesi-tos actuales Es en los viejos manuscritos donde queda testimoniada su presencia tan rica en dolores tragedias y por queacute no en amores Fue la llegada de estas mujeres una brisa de esperanza y de ilusioacuten para aquellos que ya estaban en las tierras de ultramar y

152 JUAN FRANCISCO MAURA

veiacutean venir de su propia tierra aquello que maacutes antildeoraban amantes madres hermanas Un haacutelito de vida y poesiacutea que suavizaba las costumbres de estos rudos y romaacutenticos pioneros laquoporque para ser hombres de tales empresas algo de romaacutentico debioacute de existir en ellos y que es tan propio del espantildeol y abandonariacutean en brazos tan gentiles sus bruscos modales que habiacutean adquirido en aacutespero contacto en selvas y montantildeasraquo (Villafantildee 125)

Hoy sabemos que en la normativa oficial de la Espantildea del siglo XVI y XVII se favoreciacutea el paso de mujeres al Nuevo Mundo Afirmar lo contrario no solamente es falso sino que implica un desconocimiento total de los primeros dos siglos de la colonizacioacuten espantildeola La presencia de estas mujeres espantildeolas fue efectiva laquolas disposiciones al respecto demuestran claramente que se teniacutea especial intereacutes en su arraigo y que se tra-taba de defender su posicioacuten de mujeres casadas con conquistadores y colonizadoresraquo (Villafantildee 126) Los monarcas comprendiacutean que era praacutecticamente imposible que los hombres viviesen sin mujeres y que de ser asiacute era de esperar que se cometiesen abusos con las indias lo que incidiriacutea en la moral social y en el buen gobierno de la colonia Ademaacutes sin un asentamiento definitivo con hogares y familias difiacutecilmente se podriacutea llevar a cabo una presencia permanente en las nuevas colonias (Orsquo Sullivan-Beare 45)

Empezando por los Reyes Catoacutelicos la preocupacioacuten de que en las colonias se esta-bleciesen nuacutecleos que tuviesen como base la familia cristiana fue clara Las capitulacio-nes que a este efecto se hicieron entre los conquistadores y la Corona fueron nume-rosas La efectuada entre Rodrigo de Baacutestidas y Carlos V puede ser un buen ejemplo Fechada en Valladolid el 6 de noviembre de 1524 muestra el propoacutesito de Baacutestidas de establecer una colonia permanente en la desembocadura del riacuteo Magdalena en el terri-torio que hoy vendriacutea a corresponder a Colombia El documento firmado por el Empe-rador comienza asiacute

El Rey Por cuanto por parte de vos Rodrigo de Baacutestidas vecino de la ciudad de Santo Domingo de la Isla Espantildeola Me fueacute fecha relacioacuten que por servicio de la Catholica Reyna Mi Sentildeora e Nuestro os ofre-ceacuteis de poblar e poblariades la provincia e puerto de Santa Marta que en Castilla de Oro llamada la Tierra Firme e que la poblariades dentro de dos antildeos siguientes haciendo en ella un pueblo en que no menos haya en eacutel al presente cincuenta vezinos que los quince de ellos sean casados y tengan consigo a sus mujeres y que lo teniades fecho dentro de dos antildeos y de hoy en adelante lo maacutes que fuese posible asiacute de cris-tianos espantildeoles como de indios (Restrepo 1 30)

De igual manera el priacutencipe Felipe (futuro Felipe II) en las capitulaciones establecidas en 1547 con Juan de Sanabria para que eacuteste fuese como gobernador y capitaacuten general de la dicha provincia escribe lo siguiente laquoPrimeramente que seais obligado e os obligeis a llevar destos Reynos de Castilla a la dicha provincia del Rio de la Plata cien casados con sus mujeres e hijos para poblar la dicha provincia y con ellos llevareis a vuestra muger e hijos (CDI de Ameacuterica y Oceaniacutea 23 119)

En numerosas ocasiones se pone de manifiesto el apoyo de la monarquiacutea a la emigra-cioacuten femenina tantas que difiacutecilmente se podriacutean enumerar todos los casos Lo cierto es que la legislatura vigente favoreciacutea la emigracioacuten y traslado de mujeres con toda una se-

153ESPANtildeOLAS DE ULTRAMAR EN LA HISTORIA Y EN LA LITERATURA

rie de alicientes137 sobre todo si eacutestas estaban casadas pasaje para llevar a las familias franquicia de derecho para los artiacuteculos que portasen consigo favoritismo en cargos destinos y contrataciones a aquellos que pasasen con sus mujeres incluyendo ademaacutes de los castellanos y leoneses a suacutebditos de otras partes de la corona incluso genoveses y portugueses si estos veniacutean acompantildeados de sus consortes (Fernaacutendez Duro 15-16)

Incluso se llegoacute a imponer penas a aquellos hombres casados que no llevasen a sus mujeres con ellos a Indias en el teacutermino de un antildeo El mismo emperador en una ceacutedula otorgada al virrey de la Nueva Espantildea le recomendaba que laquoprocurase persuadir a ca-sarse a los solteros que estuviesen en edad y situacioacuten de hacerloraquo prometieacutendoles que al efectuar el matrimonio seriacutean preferidos en el reparto de indios En la isla de San Juan de Puerto Rico los cargos oficiales y oficios puacuteblicos debiacutean de ser desempentildeados por los casados en primer lugar En Meacutexico ocurrioacute lo mismo con los cargos de corregido-res (Konetzke laquoemigracioacutenraquo 140-41) Felipe II al igual que sus antecesores y sucesores reiteraraacute y justificaraacute los beneficios de los que seraacuten acreedores aquellos que tengan allaacute a sus mujeres laquoque los que han servido en los descubrimientos de las dichas Indias y tambieacuten los que ayudan a la poblacioacuten dellas que tienen allaacute sus mugeres sean preferi-dos en los aprouechamientos qualesquierraquo mandando que despueacutes de los conquistado-res se tuviera en cuenta para la laquoprovisioacuten de los corregimientosraquo a los colonos casados siempre que estuvieran capacitados para dichos cargos (Konetzke laquoemigracioacutenraquo 141)

Las disposiciones en favor del matrimonio son claras ya sea por medio de un favo-ritismo manifiesto como en los casos antes citados o mediante medidas de cohercioacuten para que esta poliacutetica se llevase a cabo Don Sebastiaacuten Ramiacuterez de Fuenleal obispo de Santo Domingo y presidente de la Audiencia de Meacutexico propuso que a aquellos enco-menderos que no estuviesen casados y que no hubiesen tomado parte en la conquista se les quitase los indios concedidos con la obligacioacuten de devolveacuterselos si en el plazo de un antildeo habiacutean contraiacutedo matrimonio (Konetzke laquoemigracioacutenraquo 142-43) Por supuesto hubo excepciones a estas reglas En algunos casos ni la mujer teniacutea especial intereacutes en vivir junto con su marido en las Ameacutericas ni el marido queriacutea ir a buscar a su mujer pasado el plazo de un antildeo En el presente documento y de forma excepcional las auto-ridades reales protegen a los conyuges para que puedan seguir viviendo separados en continentes diferentes

Nuestras justicias de la ysla de Cubagua e otras qualesquier de las nuestras Yndias yslas e tierra firme del mar oceacuteano e a cada uno e qualquier de vos a quieacuten esta mi ceacutedula fuese mostrada por parte de Alonso de Tapia nuestro veedor de la provincia de Paria me ha sido hecha relacioacuten que ha mucho tiempo que reside en esas partes donde nos ha servido en lo que se ha ofrecido e que agora vos otros le apre-miaacuteis a que venga o embiacutee a estos Reinos por su muger lo cual no puede al presente hazer a causa de no ter posibilidad para ello a mi me ha suplicado vos mandase que no le compeliacuteesedes ny apremiaacutesedes a que viniese o enviase por la dicha su muger y dieacutesedes por libres los fiadores que tenyades para que dentro de un antildeo embiariacutea o verniacutea por

137 Reales Ceacutedulas de los antildeos 1502 y 1503 Academia de la Historia Coleccioacuten Muntildeoz tomo 75 fols 209 y 220 citado por Fernaacutendez Duro 15

154 JUAN FRANCISCO MAURA

ella o como la mi merced fuese lo cual visto por los de nuestro consejo juntamente con una peticioacuten presentada por dontildea Mariacutea Gudiel muger del dicho Alonso de Tapia por la cual nos suplica lo mismo que acor-dado que debiacutea mandar esta mi ceacutedula para vos por la qual vos mando que no compelaacuteis ni apremieacuteis al dicho Alonso de Tapia a que venga ni enviacutee a estos reinos por la dicha su muger si no fuere a que la pro-vea de lo que fuere necesario para su mantenimiento y deys por libres quales quier fianzas que sobre ello haya dado e no fagades ende al por alguna manera Firmado en la villa de Valladolid a VII diacuteas del mes de febrero de mil e quinientos e treinta y siete antildeos yo el licenciado Con-de de Samano y sentildealada del cardenal Beltraacuten y Carbajal [Aparte en letra pequentildea] Este diacutea se despachoacute una provisioacuten por la cuaacutel su Mag hizo merced a Alonso de Tapia de la veedoriacutea de la provincia de Paria por muerte de Garciacutea de Aguilar con las clausulas ordinarias y con el mismo salario que teniacutea Aguilar Firmado del emperador y de Beltraacuten y Bernal y Velaacutezquez El Rey (Registro de disposiciones Riacuteo Marantildeoacuten AGI Indiferente General Legajo 416 libro 2 Fols 94v y 95r)

El punto maacutes interesante a destacar de todas estas disposiciones oficiales en cuanto a la emigracioacuten femenina al Nuevo Mundo no es otro que la libertad que se da a la mujer de decidir si quiere o no casada o sin casar trasladarse al nuevo continente no como una imposicioacuten sino como un precepto laquoel espiacuteritu de las disposiciones en el sentido de asegurar la vida marital de los casados significa que la mujer que su marido invita a pa-sar a las Indias puede negarseraquo (Villafantildee 127) Habriacutea que ver las opciones laquorealesraquo ade-maacutes de las legales y econoacutemicas que le quedaban a la mujer si tomaba esta decisioacuten

El saber la libertad de eleccioacuten que estas mujeres teniacutean de antemano antes de aden-trarse en las interminables penalidades y aventuras que los viajes de la navegacioacuten tran-soceaacutenica suponiacutean hace que sus hechos y esfuerzos cobren auacuten maacutes relieve En nume-rosas ocasiones estas mujeres cruzaron el oceacuteano una y maacutes veces sin otro motivo que el de defender los derechos e intereses de los suyos Lo que resulta maacutes valioso de todo esto es que lo hicieran por propia iniciativa arriesgando sus vidas para que se hiciese justicia y para que no les faltase lo necesario a aquellos que estaban en la otra orilla Las autoridades vigentes conocedoras de los vaciacuteos legales existentes en las nuevas colo-nias se apresuraron a poner en vigor aquellas normas que redundaran en el beneficio de los menos favorecidos por las circunstancias La institucioacuten del matrimonio cuya trans-cendencia es fundamental en la vida juriacutedica y social de la mujer tuvo que ser legislada en Ameacuterica con una serie de nuevas disposiciones agregados modificaciones y aclara-ciones Asiacute pues la legislacioacuten de base espantildeola tuvo que sufrir en tierras americanas esta serie de cambios por motivos poliacuteticos y sociales (Villafantildee 126)

Para hacer un sumario de lo dispuesto hasta el siglo XVI en cuanto a la legislacioacuten de las mujeres que teniacutean familia o intereses en Indias merece la pena mencionar que existieron una serie de disposiciones que protegiacutean a las mujeres para que eacutestas no se viesen abandonadas por sus maridos En un epiacutegrafe de la Recopilacioacuten de 1680 (libro VII tiacutetulo 3) se deja ver claramente la preocupacioacuten de las autoridades en este asunto laquoDe los casados en Espantildea e Indias que estaacuten ausentes de sus mujeres y esposasraquo (Vi-llafantildee 126-27)

155ESPANtildeOLAS DE ULTRAMAR EN LA HISTORIA Y EN LA LITERATURA

La lista de disposiciones se hace interminable En los reinados de Fernando el Catoacute-lico Carlos V Felipe II Felipe III o incluso Carlos II la insistencia es constante La ra-zoacuten de esta insistencia seriacutea bastante obvia dado que con un oceacuteano por medio seriacutean muchos los que se aprovechasen de llevar una doble vida marital sin el estricto control y vigilancia de sus mujeres que se encontraban en la peniacutensula La ley XXVII libro IX tiacutetulo XXVI determina laquoDeclaramos por personas prohibidas para embarcarse y pasar a las Indias todos los casados y desposados en estos reinos lsquosino llevaren con ellos sus mujeresrsquo aunque sean virreyes oidores gobernadores o nos fuesen a servir en cual-quier cargo y oficios de Guerra Justicia y Hacienda porque es nuestra voluntad que todos los susodichos lleven a sus mujeresraquo (Villafantildee 127) laquoLos eclesiaacutesticos eran los en-cargados de dar cuenta a los tribunales competentes de aquellos que estando casados permaneciacutean en Indias sin sus mujeres Son reiteradas las disposiciones de Fernando el Catoacutelico en este sentidoraquo138 En 1514 el rey don Fernando ordena en una provisioacuten para la isla Espantildeola laquodoy licencia eacute facultad aacute cualquier persona naturales de estos Reynos para libremente se puedan casar con mujeres naturales de esa dicha ysla sin tener que incurrir por ello en pena algunaraquo (Villafantildee 129)

No se debe olvidar tampoco a aquellas mujeres que decidieron pasar a las laquonuevas tierrasraquo solteras Estas mujeres tambieacuten tuvieron un papel importante en el desarrollo de las nuevas colonias Los organismos espantildeoles del momento como los mandatarios indianos y todos los cronistas no dejaron pasar desapercibida la importancia social de estas mujeres en la poliacutetica de poblamiento laquo[E]s cierto que los pueblos de Indias nuevamente poblados no se tienen por fijos o estables ni permanentes hasta tanto que mujeres espantildeolas entren en ellos y los encomenderos y conquistadores se casen por muchas causas y respetos buenos y saludables que para ello hayraquo (Villafantildee 126-27)

Si la intencioacuten era la de una presencia permanente en las tierras americanas la mujer soltera que pasase a ellas siempre seriacutea un motivo maacutes para el colono o conquistador de continuar en el mismo suelo Se podriacutea empezar una familia si asiacute se quisiese sin tener que pensar en volver a la metroacutepoli ya fuese a disfrutar de los bienes adquiridos o a laquobuscarraquo una esposa El problema aparecioacute cuando se produjo un exceso de mujeres solteras lo que de alguna manera alteroacute la estructura social existente ya que no habiacutea muchas opciones para ellas aparte del matrimonio o el convento

En consideracioacuten a que la experiencia habiacutea demostrado que un exce-sivo nuacutemero de mujeres ejerciacutea perniciosa influencia sobre la moral y las costumbres se suplicaba al rey no otorgase a aquellas tantas auto-rizaciones para emigrar al Peruacute La ciudad de la Plata fundada en 1538 emite en 1577 un informe en el que se expone la urgente necesidad de que se funde un convento de monjas pues en el territorio de las Au-diencias de Los Charcas existiacutea un gran nuacutemero de muchachas que no pudieacutendose casar se hallaban en gran peligro de perderse (Konetzke laquoemigracioacutenraquo 149)

138 Solorzano Pereira Juan de Libro Primero de la Recopilacioacuten de las Ceacutedulas Reales Cartas y Provisiones y Or-denanzas Reales Noticia preliminar de Ricardo Levenne Universidad de Buenos Aires Facultad de Derecho Y Ciencias Sociales Pub del Instituto de Historia del Derecho Argentino Coleccioacuten de Textos y Documentos para la Historia del Derecho Argentino t V Buenos Aires Imp de la Universidad de Buenos Aires 1945 (Li-bro I Ley 10 laquoQue los Espantildeoles puedan casar con Indias y al contrario a su voluntadraquo t2 p 138 citado en Villafantildee 129

156 JUAN FRANCISCO MAURA

Entristece ver coacutemo se manejan las cifras de estas mujeres como si de ganado o de bienes suntuarios se tratase Por otra parte existieron irregularidades como la de pobla-doras espantildeolas que vivieron amancebadas con hombres que ya estaban casados en la peniacutensula Normalmente esto ocurriacutea cuando la estancia del conquistador se prolonga-ba maacutes de lo debido en lugares donde habiacutea pocas espantildeolas Muchas veces nacieron hijos de estas uniones que hicieron auacuten maacutes difiacutecil la situacioacuten para las mujeres que esperaban en Espantildea a un marido que ya no teniacutea ningunas intenciones de volver En los juicios de residencia los documentos acostumbran a citar estos casos ya que era parte de su obligacioacuten castigar las irregularidades extramatrimoniales y salvaguardar las buenas costumbres familiares que con tanto intereacutes se deseaba mantener laquoUn ejemplo nos lo da la isla de Cuba donde en 1532 viven con hombres casados Olalla Hernaacuten-dez Santillana Aranda lsquola Cordobesarsquo Catalina de Leoacuten Catalina Saacutenchez Francisca Hernaacutendez Mayor de Azebedo Juana de Valeros y lsquouna mujer que estaba en casa de Ayalarsquoraquo (Borges 416)

Estos casos no fueron aislados y mucho menos en Cuba centro neuraacutelgico de todo el movimiento de ida y vuelta entre la metroacutepoli y el Nuevo Mundo Estas ocho acusa-ciones por lo tanto no tienen porqueacute considerarse extraordinarias y menos en el lugar maacutes cosmopolita de las Indias en esos momentos al que llegaban flotas a cada momen-to Al parecer existieron casos parecidos en el Riacuteo de la Plata Peruacute y Nueva Espantildea (Ratcliffe 347) El margen legal para que estas mujeres viviesen como quisiesen estuvo limitado por una moral que veiacutea uacutenicamente en el matrimonio o el convento una salida laquovaacutelidaraquo para que fueran aceptadas socialmente Los hombres en iguales circunstan-cias fueron juzgados por una laquomoralraquo mucho maacutes permisiva

La mujer y el cuerpo eclesiaacutestico

Pues iquestquieacuten diablos os traiacutedo aquiacute dijo don Quijote siendo hombre de la iglesia iquestQuieacuten sentildeor replicoacute el caiacutedo laquomi desventuraraquo Pues otra mayor os amenaza dijo don Quijote sino me satisfaceacuteis a todo cuanto primero os pregunteacute (Cervantes Don Quijote )

Otro factor a tener en cuenta en un anaacutelisis sobre la presencia de la mujer en el Nuevo Mundo es el que tiene que ver con la institucioacuten maacutes importante de las que llegaron desde Europa la iglesia catoacutelica Sin aacutenimo de criticar a tan compleja institucioacuten res-ponsable de gran parte de los aconteceres en el Nuevo Mundo vale la pena analizar algunas singularidades Muchos de sus miembros fueron grandes ejemplos de valor e inteligencia a la hora de tratar los maacutes variados y escabrosos asuntos con los que se encontraron los cristianos en la otra orilla durante este periacuteodo Se debe resaltar tam-

157ESPANtildeOLAS DE ULTRAMAR EN LA HISTORIA Y EN LA LITERATURA

bieacuten su caraacutecter medieval en la manera de hacer apostolado y de entender y tratar a los potenciales cristianos Si se tienen en cuenta los privilegios y prerrogativas que algunas de las altas jerarquiacuteas eclesiaacutesticas tuvieron no seriacutea superfluo estimar que un respeta-ble porcentaje de la poblacioacuten de origen laquodudosoraquo muy bien podiacutea venir de la misma iglesia Fueron muchas las viacutectimas y muchas las familias divididas por un padre laquoinvi-sibleraquo Gran parte de los hijos o laquosobrinosraquo de estos sacerdotes pasaron a ocupar cargos similares incluyendo los privilegios que estos cargos llevaban consigo como si se trata-se de cualquier otro oficio gremial transmitido generacionalmente regla tan comuacuten en la Europa medieval Todaviacutea a finales del siglo XIII en Espantildea los derechos de los hijos y nietos de los sacerdotes estaban protegidos por la ley sin que hubiesen podido ser erradicados por las reformas gregorianas (Ratcliffe 347)139

Las letras espantildeolas ya se haciacutean eco de estos lances amorosos entre representantes de la Iglesia y ciertas damas del lugar desde los tiempos del poeta riojano Gonzalo de Berceo En su obra maacutes conocida Los milagros de Nuestra Sentildeora Berceo describe con un realismo ingenuo y sencillo relatos de humor y de humanismo sobre aquellos hombres de carne y hueso que eran perdonados por la intercesioacuten de la Virgen Mariacutea Juan Ruiz por su lado haraacute de su Libro de buen amor la obra maacutes representativa en este sentido Seriacutea prolijo recordar la actuacioacuten de la Iglesia durante diversos periacuteodos de la Edad Media no soacutelo en Espantildea sino en toda Europa En la Espantildea musulmana del siglo XII concretamente en Sevilla el comportamiento de los representantes de la iglesia cristia-na (mozaacuterabe) en territorio islaacutemico es duramente criticado por el sevillano Ibn Abdun Este precioso documento muestra el estricto control y falta de confianza que existiacutea sobre la mujer prohibieacutendolas que entrasen en las laquoabominablesraquo iglesias cristianas

porque los cleacuterigos [cristianos] son libertinos fornicadores y sodomi-tas Asimismo debe prohibirse a las mujeres francas que entren en la iglesia maacutes que en diacuteas de funcioacuten o fiesta porque alliacute comen beben y fornican con los cleacuterigos y no hay uno de ellos que no tenga dos o maacutes de estas mujeres con que acostarse Han tomado esta costumbre por haber declarado iliacutecito lo liacutecito y viceversa Convendriacutea pues mandar a los cleacuterigos que se casasen como ocurre en Oriente y que si quie-ren lo hagan (Leacutevi-Provenccedilal 150)

Pese a existir una convivencia paciacutefica durante gran parte de la Edad Media entre los tres credos monoteiacutestas de Espantildea (cristianos musulmanes y judiacuteos) esto no suponiacutea que no existiese desprecio y desconfianza entre estos grupos religiosos Dice Abdun resaltando el peligro que suponiacutea que una mujer entrase en casa de un cleacuterigo cristiano de vida ceacutelibe

No debe tolerarse que haya mujer sea vieja o no en casa de un cleacuterigo mientras eacuteste rehuacutese casarse Obliacutegueseles ademaacutes a circuncidarse co-mo les obligoacute al-Mutadid pues si a lo que dicen siguen el ejemplo de Jesuacutes (iexclDios les bendiga y salve) Jesuacutes se circuncidoacute y precisamente ellos que han abandonado esta praacutectica tienen una fiesta que celebran solemnemente el diacutea de su circuncisioacuten (Leacutevi-Provenccedilal 150-151)

139 Valdriacutea la pena ver si han cambiado mucho las cosas desde hace quinientos antildeos a esta parte o si in-cluso la iglesia moderna ha retrocedido en tolerancia en cuanto a las relaciones sexuales de los representantes de la Iglesia

158 JUAN FRANCISCO MAURA

El historiador argentino Germaacuten Arciniegas recoge un pasaje ilustrativo de lo men-cionado anteriormente pero trasladado al ambiente de la colonia diciendo que incluso en poblaciones pequentildeas como Santa Fe con poco maacutes de un convento y una ermita la fragilidad de la carne enredaba a frailes soldados y virreyes por igual laquoEl buen So-liacutes que murioacute en olor de santidad con la cabeza reclinada sobre un par de ladrillos y en saya de franciscano cruzaba en las noches el solar de su palacio para ir a besar a la Marichuelaraquo (118-19)

Arciniegas recoge tambieacuten un suceso aparecido en el diario de Lima en 1667 que no tuvo que ser extraordinario durante los primeros antildeos de la colonia laquoEl fraile carmelita mdashGrande hereje y siendo sacerdote deciacutea misa gran perro lujurioso deshonesto que relatando sus maldades dijo que en cierta ciudad habiacutea conocido carnalmente a maacutes de trescientas y sesenta mujeres y en un convento de monjas habiacutea cometido muchos sacrilegios Este lo trujeron preso de Buenos Aires por Chileraquo (119)

Las controversias de la iglesia moderna sobre las relaciones que los eclesiaacutesticos de-ben tener con el sexo femenino parece que no han encontrado todaviacutea respuesta Sigue existiendo miedo y recelo a que la mujer comparta no soacutelo poder en la jerarquiacutea de la iglesiacutea sino en la vida privada de los miembros de la institucioacuten En la Nueva Espantildea el primer obispo de Meacutexico Juan de Zumaacuterraga viendo en la mujer un ser de tentacioacuten irresistible prohibioacute terminantemente la presencia de eacutestas en su casa Ni siquiera para su limpieza y aseo El franciscano Juan de Torquemada se refiere a este comportamien-to como una de las virtudes del popular obispo

Fue este benditiacutesimo prelado muy amigo de la virtud y de virtuosos y aceacuterrimo reprehendedor de vicios y viciosos y tan enemigo de la ociosidad que no permitiriacutea que alguno de su casa estuviese ocioso fue amiciacutesimo de la limpieza por lo cual jamaacutes consintioacute que mujer alguna entrase en su casa aunque fuese necesaria al servicio de ella ni nunca consintioacute que por alguna ocasioacuten subiese mujer a lo alto y aposentos de ella antes lo teniacutea todo cerrado como un monasterio porque sabiacutea (como quien tambieacuten sabiacutea) que la ocasioacuten suele derribar los maacutes fuertes y robustos corazones (450 lib 20 cap 31)

No fueron uacutenicamente miembros de la iglesia catoacutelica los que valoraron la lucha con-tra la tentacioacuten siguiendo al pie de la letra el crudeliacutesimo refraacuten laquoentre santa y santo pared de cal y cantoraquo Se tienen algunas noticias de la vida social de los primeros tiem-pos de la colonia En estos documentos se puede observar coacutemo no distaban mucho las oacuterdenes que se dictaban en la metroacutepoli y las que se llevaban a cabo en la Nueva Espantildea La vida social tanto de damas como de algunos miembros de la iglesia de las colonias era maacutes laquorelajadaraquo de lo que las normas permitiacutean Gracias a la informacioacuten ofrecida por Manuel Romero de Terreros disponemos de los nombres de las primeras virreinas

Las esposas de los primeros cinco Virreyes Don Antonio de Mendoza Don Luis de Velasco Don Gastoacuten de Peralta Don Martiacuten Enriacutequez de Almanza y Don Lorenzo Suaacuterez de Mendoza Conde de la Coruntildea fueron respectivamente Dontildea Caterina de Vargas Dontildea Ana de Cas-tilla y Mendoza hija de Don Diego de Castilla Sentildeor de Gor y Caba-

159ESPANtildeOLAS DE ULTRAMAR EN LA HISTORIA Y EN LA LITERATURA

llerizo de Carlos V Dontildea Leonor de Vieo Dontildea Mariacutea Manrique hija del Marqueacutes de Aguilar y Dontildea Catalina de la Cerda hija del segundo Duque de Medinaceli (Romero 2)

Existen noticias concretas de la seacuteptima virreina de la Nueva Espantildea (1586) dontildea Blanca de Velasco marquesa de Villamanrique En ellas destaca lo anteriormente men-cionado sobre la falta de tolerancia existente en aquellos tiempos difiacutecilmente com-prensible si no fuera por fragmentos esporaacutedicos conservados sobre la vida colonial en la Nueva Espantildea En la siguiente Relacioacuten hecha por autores anoacutenimos sobre la visita que hizo Fray Alonso Ponce Comisario General de la Orden Seraacutefica a las provincias de la Nueva Espantildea se mencionan las eneacutergicas medidas que con los miembros de su orden en su opinioacuten de moral laquomuy relajadaraquo tomoacute este religioso Tambieacuten aparecen mencionadas sus relaciones con la Virreina

Captoacutese ademaacutes la enemistad del gobernante y de la Virreina Dontildea Blanca de Velasco hija del cuarto Conde de Nieva sentildeora seguacuten pare-ce de conducta ligera y caraacutecter maacutes que dominante laquoPor este mismo tiempo (septiembre de 1586) fueron el Virey y la Vireyna a holgarse y recrearse en la cibdad de Xochimilco Posoacute con toda su casa dentro de nuestro convento en un dormitorio deacutel y detuacutevose alliacute siete u ocho diacuteas en que los indios les hicieron grandes fiestas aunque les costaron caras porque en una dellas murieron dos o tres dellos con un tiro que se disparoacute y reventoacute y al principal indio de aquella cibdad hirieron muy malraquo (Romero 3-4)

A pesar del riacutegido control eclesiaacutestico y civil que habiacutea en la Nueva Espantildea existieron tambieacuten pareacutentesis en los que incluso miembros de la iglesia y mujeres mdashhumanos al fin y al cabomdash pudieron disfrutar de algunos momentos de regocijo y alegriacutea Con-tinuando con la cita anterior el mismo autor se queja del laquoexcesoraquo de libertad en los frailes que se suponiacutea que teniacutean que profesar una extremada pobreza y no digamos castidad En primer lugar se describen pormenorizadamente la abundancia en el tipo y cantidad de comida de toda clase dulces y vino que se consumieron con largueza y generosidad durante aquellas fiestas Pero lo que maacutes indigna al autor (o autores) fue que llegasen a entrar mujeres en el convento

y aunque todo esto es malo delante de Dios y delante de los hom-bres lo que maacutes mal parecioacute y de que todo el mundo tuvo que mur-murar fueacute la demasiada libertad rotura y disolucioacuten que hubo en en-trar y estar muy de propoacutesito mujeres no soacutelo la Vireyna y las suyas sino otras muchas dentro del dicho convento y andar por las celdas como si fuese cosa profana y como si no hubiera breve apostoacutelico que soacute graves penas y censuras prohibe estas entradas y como si a los frai-les no los comprendiera el dicho breve por admitirlas y no estuviera asiacute declarado y mandado por nuestros estatutos generales de Toledo (Romero 4-5)

La preocupacioacuten por las laquotentaciones de la carneraquo fuera del matrimonio siempre es-tuvo en la mente de los religiosos espantildeoles asiacute como de otras nacionalidades y reli-

160 JUAN FRANCISCO MAURA

giones que intentaban vanamente erradicar algo tan intriacutenseco al ser humano como a cualquier otra especie animal Esta preocupacioacuten se acentuoacute mucho maacutes en el Nuevo Mundo donde muchas sociedades tribales no veiacutean a la mujer como parte integrante de su propiedad privada La razoacuten es obviamente socioloacutegica y ha existido desde el principio de los tiempos en las civilizaciones maacutes primitivas laquoNo desearaacutes a la mujer del proacutejimoraquo El quebrantar este precepto equivaldriacutea a desestabilizar desde su base a la sociedad judeo-cristiana fundamentada en la familia Las penas aplicadas en estas transgresiones seraacuten lo suficientemente severas como para marginar socialmente mdashen el mejor de los casosmdash a aquellos que las pongan en praacutectica Siendo la mujer la encar-gada por la naturaleza de trasmitir la descendencia de la especie su libertad sexual se veraacute limitada por el peligro de quedar embarazada cada vez que ignore tal elemental precepto140

Primeras escritoras del Nuevo Mundo

Contra cuerdos y contra locos estaacute obligado cualquier caballero andante a volver por la honra de las mujeres cualesquiera que sean Cuanto maacutes por las reinas de tan alta guisa y pro como fue la reina Madaacutesima a quien yo tengo particular aficioacuten por sus buenas partes porque fuera de haber sido fermosa ademaacutes fue muy prudente y muy sufrida en sus calamidades que las tuvo muchas (Cervantes Don Quijote)

Fueron varias las escritoras que durante los siglos XVI y XVII tuvieron una relacioacuten di-recta o indirecta con el Nuevo Mundo Muchas de ellas eligieron la vida monaacutestica mdashen algunos casos como refugio huyendo de sus maridosmdash uacutenica salida en una estructura social en donde no eran muchas las opciones especialmente en una eacutepoca donde el fac-tor religioso pesaba casi tanto como el econoacutemico pero sobre todo para dedicarse a una vida espiritual difiacutecilmente alcanzable en otras circunstancias Mariloacute Vigil apunta que las monjas que lo eran por su propia voluntad ademaacutes de tener inquietudes religiosas tambieacuten las teniacutean intelectuales como es el caso de la escritora miacutestica espantildeola Santa Teresa de Jesuacutes (1515-1582) que ademaacutes de tener una de las vidas maacutes interesantes que se conozcan supo sacar tiempo para escribir las maacutes bellas manifestaciones de la poesiacutea liacuterica y sobre todo de la prosa castellana (Vigil 237-38) Cada una de estas mujeres de-dicadas a la vida literaria y espiritual de su tiempo se merece muchiacutesimo maacutes espacio del que se les pueda ofrecer en estas pocas liacuteneas No obstante con estas pasajeras men-

140 Aunque afortunadamente las cosas han cambiado para la mujer no se debe dejar de mencionar la can-tidad de abusos sexuales de la que es viacutectima en la sociedad moderna

161ESPANtildeOLAS DE ULTRAMAR EN LA HISTORIA Y EN LA LITERATURA

ciones se espera al menos incluirlas y poder despertar el suficiente intereacutes para que sus vidas y sus obras no sigan sumergidas en las simas del olvido Para que estas mujeres de la iglesia pudiesen satisfacer su curiosidad cognoscitiva era necesario romper todas aquellas barreras que supusiesen un estorbo o una restriccioacuten a la hora de investigar consultar o hablar con cualquier persona religiosa de cualquier orden o secular ya fue-se obispo o cleacuterigo Las posiciones intelectuales entre las diferentes oacuterdenes religiosas fueron muy dispares como bien es sabido No eran iguales los planteamientos teoloacute-gicos de los dominicos que los de los franciscanos o los de los carmelitas que los de los agustinos o jesuitas Era necesario por lo tanto tener acceso a estas fuentes de informa-cioacuten para poder constrastar las diferencias y hacer valoraciones propias (Vigil 237-38) El escritor espantildeol Caro Baroja destaca el caraacutecter enciclopeacutedico del catolicismo donde se han integrado corrientes y posturas muy dispares que a traveacutes del diaacutelogo daban cierto espacio al creyente con maacutes curiosidad intelectual para que este pudiese compa-rar y valorar las diferentes opciones que se le ofreciacutean (Vigil 237-38)

Varias de estas mujeres intelectuales fueron hijas de conquistadores que aunque na-cidas en suelo americano seguiacutean expresaacutendose en la lengua de sus padres con no me-nos fuerza que sus contemporaacuteneas peninsulares Es cierto que existieron numerosas escritoras en el Nuevo Mundo durante el siglo XVIII algunas dedicadas incluso al estudio de las matemaacuteticas como la mexicana Dontildea Francisca Gonzaga y Castillo Pero para limitar el presente trabajo a los siglos XVI y XVII uacutenicamente se incluiraacuten ejemplos de estos dos siglos

La peruana Josefa de Alarcoacuten publicoacute en 1648 unas liras dedicadas a las Exequias del Priacutencipe Baltasar Carlos

Cifro en capilla breveEl tribunal de la Magestad maacutes graveEn fe de lo que debeA Carlos que en dos mundos no cabe141

El caso de Sor Jeroacutenima de la Asuncioacuten es muy interesante una mujer que tuvo la oportunidad de viajar a Meacutexico y posteriormente a las Filipinas para cumplir con las mi-siones que le habiacutean sido encomendadas por su orden Nacida en Toledo en 1555 en el seno de una noble y acaudalada familia estuvo destinada a recorrer el mundo ofrecien-do sus servicios a todos los necesitados distinguieacutendose por su ardiente caridad laquovien-do que los galeotes eran tratados con dureza excesiva sobre todo cuando los llevaban de un pueblo a otro procuroacute aliviar las penas de aquellos desgraciados y lo consiguioacute en parteraquo (Serrano y Sanz 268 65) Hija del licenciado e ilustre jurista Pedro Garciacutea Yaacute-ntildeez y de dontildea Catalina de la Fuente ingresoacute contra su voluntad en el monasterio de las Clarisas de Santa Isabel de los Reyes (Toledo) el 5 de agosto de 1570 (Trevintildeo 46) hay que decir que eacutesta no seraacute la uacutenica voluntad contra la que tuvo que luchar

Sor Jeroacutenima se embarcoacute para Meacutexico y de alliacute partioacute hacia Manila junto con siete compantildeeras en el famoso laquoGaleoacuten de Manilaraquo que saliacutea anualmente del puerto mexi-cano de Acapulco Su viaje a las Filipinas duroacute un antildeo y tres meses desde su salida de Espantildea tiempo en el que demostroacute un gran valor y determinacioacuten por el soacutelo hecho de

141 Manuel Serrano y Sanz Apuntes para una biblioteca de escritoras espantildeolas desde el antildeo 1401 al 1833 vols 268 269 270 271 Biblioteca de Autores Espantildeoles (Madrid Atlas 1975) 268 19

162 JUAN FRANCISCO MAURA

embarcarse en tan precarias naves Fue la primera misionera de Oceaniacutea muriendo en Manila en 1621 Alliacute fundoacute el monasterio de Santa Clara que perviviriacutea hasta ser bom-bardeado en la Segunda Guerra Mundial (Trevintildeo 47) Escribioacute su Vida donde trata de la fundacioacuten del convento y de todas las tribulaciones mdashllegoacute a ser excomulgadamdash y satisfacciones que una vida dedicada a una causa justa proporciona Tambieacuten escribioacute una obra de caraacutecter filosoacutefico-teoloacutegico titulada Carta de marear en el mar del mundo nombre alegoacuterico que da cuenta de la enorme distancia recorrida a traveacutes del laquomar del espiacuterituraquo por sor Jeroacutenima He aquiacute algunos de sus versos de caraacutecter religioso

Vuestra soy para vos naciacuteiquestQueacute mandaacuteis hacer de miacute Inaccesible grandezaEterna Sabiduriacuteay bondad del alma miacuteaDios un ser poder y Altezamirad la suma pobrezade eacutesta que se ofrece aquiacuteiquestQueacute mandaacuteis hacer de miacute (Serrano y Sanz 268 66)

Ya en Meacutexico tenemos otro ejemplo de una mujer dedicada por completo a Dios y al estudio y composicioacuten de obras de caraacutecter teoloacutegico Dontildea Ana Mariacutea del Costa-do de Cristo nacida en la ciudad de Tlaxcala hacia el antildeo 1650 Tomoacute la orden de San Francisco para consagrarse a las labores de su orden y a la escritura Se dice que con los escritos de Dontildea Ana Mariacutea se podriacutean formar veinte tomos (Serrano y Sanz 268 282) Estas son algunas de sus obras Vida y muerte de Jesucristo Nuestro Sentildeor Vida del Seraacutefico Padre San Francisco de Asiacutes Vida de la iacutenclita Virgen Santa Clara Vida del sutiliacutesimo doctor Juan Duns Escoto

Pero no todas las monjas tuvieron vidas tan dedicadas al estudio y la oracioacuten Loacutegica-mente entre un nuacutemero tan grande de mujeres existioacute de todo y seriacutea un error pensar que todos los conventos femeninos estaban integrados por laquocaacutendidas palomasraquo Una monja en el siglo XVI y XVII teniacutea mucha maacutes fuerza que una mujer ordinaria ya que actuaban en grupo y la entrada a los recintos donde viviacutean estaba permitida solo a mu-jeres Esta situacioacuten las haciacutea mucho maacutes fuertes a todos los niveles que una mujer sola protegida uacutenicamente por su familia laquoLas monjas durante los siglos XVI y XVII lucharon por eludir la clausura y por zafarse del control que los frailes de las secciones masculi-nas de sus congregaciones ejerciacutean sobre ellasraquo (Vigil 230) Soacutelo un antildeo maacutes tarde que dontildea Ana Mariacutea del Costado de Cristo en 1651 y a 12 leguas de Meacutexico nacioacute la sin par Sor Juana Ineacutes de la Cruz hija de don Pedro Manuel de Asbaje natural de Vergara (Vizcaya) y de Dontildea Isabel Ramiacuterez de Santillana hija de espantildeoles (Serrano y Sanz 268 289) Por ser sin lugar a dudas la poeta maacutes importante de su tiempo y probable-mente la maacutes conocida del mundo hispano no profundizaremos en ella Su obra es un canto a la inteligencia y el exponente maacutes destacado de la literatura barroca americana tanto en prosa como en verso Destacareacute simplemente que Sor Juana Ineacutes pese a vivir en un sociedad donde no eran excesivas las libertades concedidas a las mujeres tuvo el caraacutecter y la determinacioacuten de dejarnos las maacutes bellas poesiacuteas amorosas que si bien estuvieron enmarcadas en un ambiente religioso como era de esperar por su condicioacuten

163ESPANtildeOLAS DE ULTRAMAR EN LA HISTORIA Y EN LA LITERATURA

pudieron transcender como unas de las maacutes bellas manifestaciones literarias que hoy en diacutea se conservan Fue su agudeza mental sensibilidad y cultura tal que no fueron suficientes los soacutelidos muros del convento para contener el genio de tan extraordinaria mujer Recordemos sus conocidiacutesimos versos en defensa de las mujeres

Hombres necios que acusaacuteisa la mujer sin razoacutensin ver que sois la ocasioacutende lo mismo que culpaacuteis142

Las metaacuteforas y la delicadeza que emplea en rebatir a su obispo en su laquoRespuesta a sor Filotea de la Cruzraquo no son solamente el epiacutetome del feminismo de su tiempo sino una de las maacutes brillantes manifestaciones del barroco hispano Poesiacutea teatro ensayo y un conocimiento extraordinario de las ciencias claacutesicas de su tiempo hacen de esta mujer un ejemplo extraordinario de las letras universales Ya son cientos los artiacuteculos y libros que se han escrito sobre Sor Juana y no dejan de aparecer tesis doctorales sobre los maacutes diversos temas conectados con la citada autora143 Como nos dice Stephanie Merrim en su documentada obra Early Modern Womenrsquos Writing and Sor Juana Ineacutes de la Cruz

She wrote and published on secular themes as atypical for a nun as human love Her remarkably extensive writings essayed and reenacted most of the (male) poetic dramatic theological and even philosophi-cal discourses of her times in the metropolis making her works a com-pendium of baroque culture in its diversity and syncretism Sor Juana self-creation as a learned women effectively toppled many of the walls in which she was materially enclosed and positioned her within the dynamic world of early modern European culture (xii)

No se debe dejar de mencionar a otras escritoras novohispanas de la eacutepoca que aun-que no fueron tan proliacuteficas y relevantes como Juana Ineacutes de la Cruz dejaron testimo-nio de algunos acontecimientos que tienen intereacutes socioloacutegico o testimonial Este es el caso de Dontildea Mariacutea Estrada Medinilla de igual nombre y apellido que la mujer que acompantildeoacute a las tropas de Corteacutes en su primera entrada a Meacutexico Natural de Meacutexico publicoacute toda su obra a mediados del siglo XVII concentraacutendose principalmente en la lle-gada del Marqueacutes de Villena virrey y capitaacuten general de la Nueva Espantildea a la ciudad de Meacutexico en el antildeo 1640 Escrita en octavas reales la obra trata de las fiestas de toros y cantildeas con que se obsequioacute al citado virrey Fue impresa en Meacutexico en 1641 (Serrano y Sanz 269 402)

Mucho maacutes importante para el presente libro es Dontildea Isabel de Guevara que escribioacute en 1556 la carta en que se expone la ayuda que ofrecieron las mujeres en el descubri-miento y conquista del Riacuteo de la Plata No cabe la menor duda de que esta carta es uno

142 Para una mejor comprensioacuten del caraacutecter de esta excepcional mujer veacutease entre los numeros trabajos publicados Fredo Arias de la Canal Intento de psicoanaacutelisis de Juana Ineacutes y otros ensayos sorjuanistas (Meacutexico Frente de Afirmacioacuten Hispanista 1972) 47

143 Veacuteanse entre otros trabajos Octavio Paz Sor Juana Ineacutes de la Cruz o las trampas de la fe Georgina Sabat de Rivers En busca de Sor Juana Margo Glantz Sor Juana la comparacioacuten y la hipeacuterbole Gerard C Flynn Sor Juana Ineacutes de la Cruz Stephanie Merrim Feminist perspectives on Sor Juana Ineacutes de la Cruz Pamela Kirk Sor Juana Ineacutes de la Cruz religion art and feminism

164 JUAN FRANCISCO MAURA

de los documentos maacutes importantes con que contamos en relacioacuten a la aportacioacuten fe-menina en el proceso de la conquista de Ameacuterica Su importancia viene dada por varios factores Primero es uno de los primeros testimonios mdashsi no el primeromdash en donde se expone abiertamente la indispensable colaboracioacuten de las mujeres en el descubrimien-to y conquista de tierras en el Nuevo Mundo laquoQue si no fuera por ellas todos fueran acabadosraquo En segundo lugar la informacioacuten vertida en estas liacuteneas presenta en parte la manera de pensar de una mujer espantildeola en tales circunstancias Extraordinario tes-timonio de primera mano que nos da una idea de lo que significoacute en muchos casos el valor y entrega constantes de muchas de estas mujeres que auacuten a riesgo de perder sus vidas no dudaron en luchar al lado de los hombres por una causa que consideraban laquocomuacutenraquo

La relevancia histoacuterica de dicha carta hace que merezca ser transcrita en su totali-dad

Carta de dontildea Isabel de Guevara a la princesa gobernadora dontildea Juana exponiendo los trabajos hechos en el descubrimiento y conquista del Riacuteo de la Plata por las mujeres para ayudar a los hombres y pidiendo repartimiento

para su marido Asuncioacuten 2 de julio de 1556

Muy alta y muy poderosa sentildeora

A esta provincia del Riacuteo de la Plata con el primer gobernador de ella don Pedro de Mendoza hemos venido ciertas mujeres entre las cuales ha querido mi ventura que fuese yo la una y como la armada llegase al puerto de Buenos Aires con mil quinientos hombres y les faltase el bastimento fue tamantildea el hambre que a cabo de tres meses murie-ran los mil esta hambre fue tamantildea que ni la de Jerusalem se le puede igualar ni con otra ninguna se puede comparar Vinieron los hombres en tanta flaqueza que todos los trabajos cargaban de las pobres mu-jeres asiacute en lavarles las ropas como en curarles hacerles de comer lo poco que teniacutean limpiarlos hacer centinela rondar los fuegos armar las ballestas cuando algunas veces los indios les veniacutean a dar guerra hasta cometer a poner fuego en los versos y a levantar los soldados los que estaban para ello dar arma por el campo a voces sargentean-do y poniendo en orden los soldados porque en este tiempo como las mujeres nos sustentamos con poca comida no habiacuteamos caiacutedo en tanta flaqueza como los hombres Bien creeraacute V A que fue tanta la so-licitud que tuvieron que si no fuera por ellas todos fueran acabados y si no fuera por la honra de los hombres muchas maacutes cosas escribiera con verdad y los diera a ellos por testigos Esta relacioacuten bien creo que la escribiraacuten a V A maacutes largamente y por eso cesareacute Pasada esta tan peligrosa turbunada determinaron subir el riacuteo arriba asiacute flacos como estaban y en entrada de invierno en dos bergantines los pocos que quedaron vivos y las fatigadas mujeres los curaban y los miraban y les guisaban la comida trayendo la lentildea a cuestas fuera del naviacuteo y animaacutendolos con palabras varoniles que no se dejasen morir que presto dariacutean en tierra de comida metieacutendolos a cuestas en los

165ESPANtildeOLAS DE ULTRAMAR EN LA HISTORIA Y EN LA LITERATURA

bergantines con tanto amor como si fueran sus propios hijos Y como llegamos a una generacioacuten de indios que se llaman tinbues sentildeores de mucho pescado de nuevo los serviacuteamos en buscarles diversos modos de guisados porque no les diese en rostro el pescado a causa de que lo comiacutean sin pan y estaban muy flacos Despueacutes determinaron subir el Paranaacute arriba en demanda de bastimento en el cual viaje pasaron tanto trabajo las desdichadas mujeres milagrosamente quiso Dios que viviesen por ver que en ellas estaba la vida de ellos porque todos los servicios del naviacuteo los tomaban ellas tan a pechos que se teniacutea por afrentada la que menos haciacutea que otra sirviendo de marear la vela y gobernar el naviacuteo y sondar de proa y tomar el remo al soldado que no podiacutea bogar y escotar144 el naviacuteo y poniendo por delante a los soldados que no se desanimasen que para los hombres eran los trabajos verdad es que a estas cosas ellas no eran apremiadas ni las haciacutean de obliga-cioacuten ni las obligaba si solamente la caridad Asiacute llegaron a esta ciudad de la Asuncioacuten que aunque ahora estaacute muy feacutertil de bastimentos en-tonces estaba de ellos muy necesitada que fue necesario que las muje-res volviesen de nuevo a sus trabajos haciendo rosas con sus propias manos rosando y carpiendo y sembrando y recogiendo el bastimento sin ayuda de nadie hasta tanto que los soldados guarecieron de sus fla-quezas y comenzaron a sentildeorear la tierra y adquirir indios e indias de su servicio hasta ponerse en el estado en que ahora estaacute la tierra He querido escribir y traer a la memoria de V A para hacerle saber la ingratitud que conmigo se ha usado en esta tierra porque al presente se repartioacute por la mayor parte de los que hay en ella asiacute de los anti-guos como de los modernos sin que de miacute y de mis trabajos se tuviese ninguna memoria y me dejaron de fuera sin me dar indio ni ninguacuten geacutenero de servicio Mucho me quisiera hallar libre para me ir a presen-tar delante de VA con los servicios que a SM he hecho y los agravios que ahora se me hacen mas no estaacute en mi mano porque estoy casada con un caballero de Sevilla que se llama Pedro de Esquivel que por servir a SM ha sido causa que mis trabajos quedasen tan olvidados y se me renovasen de nuevo porque tres veces le saqueacute el cuchillo de la garganta como allaacute VA sabraacute A que suplico mande me sea dado mi repartimiento perpetuo y en gratificacioacuten de mis servicios [en el origi-nal del AHN Diversos doc 141 dice ademaacutes mande que sea proveydo mi marido de alguacuten cargo conforme a la calidad de su persona pues el de su parte por sus servicios lo merece] lo merece Nuestro sentildeor acre-ciente su Real vida y estado por muy largos antildeos De esta ciudad de la Asuncioacuten y de julio 2 1556 antildeosServidora de V A que sus Reales manos besa

Dontildea Isabel Guevara

144 Sacar agua de un riacuteo acequia o presa

166 JUAN FRANCISCO MAURA

Sobremdash A la muy alta y muy poderosa sentildeora Princesa dontildea Joana Gobernadora de los reinos de Espantildea etc ndash En su Consejo de Indias (Isabel de Guevara 619-21)

Iroacutenicamente la carta teniacutea que llegar a manos de la desdichada heredera del trono de Castilla e hija de los Reyes Catoacutelicos Juana laquola Locaraquo que habiacutea muerto el antildeo an-terior Son profeacuteticas las palabras de esta mujer no soacutelo porque sus hechos personales quedasen en el olvido sino porque incluso se ha borrado la historia de las mujeres en el Nuevo Mundo negando su presencia Por lo menos Isabel Guevara tuvo acceso a una pluma iquestCuaacutentas seriacutean las que ni siquiera sabriacutean escribir

Otra contemporaacutenea fue dontildea Leonor de Iciz que vivioacute durante la segunda mitad del siglo XVI Interesa sobre todo por los sonetos que escribioacute en elogio de Ercilla soldado que participoacute en la conquista de Chile y que se inmortalizoacute con su obra La Araucana (Serrano y Sanz 269 534) Lo mismo hizo Dontildea Bernarda Lintildeaacuten en 1610 autora de otro soneto en memoria del capitaacuten Gaspar Peacuterez de Villagraacute que participoacute en la conquista de Nuevo Meacutexico (Serrano y Sanz 270 14) Los escritos de estas mujeres tratan de de dos de las eacutepicas maacutes dramaacuteticas de la conquista

En el Peruacute y en pleno siglo XVII aparece otra fundadora de conventos Sor Bernardina de Jesuacutes que ademaacutes fue comparada con Santa Teresa por la semejanza de sus laquocartasraquo con las de la santa de Avila Fue fundadora del convento de Tacunga en Quito maacutes tarde destruiacutedo por un terremoto Dice Serrano y Sanz con respecto a su biografiacutea un tanto legendaria que fue carmelita descalza de Lima y hermana de Dontildea Mariacutea Benavides y Esquivel abuela de D Pedro de Peralta Barnuevo (Serrano y Sanz 269 553) Dicen que esta santa se alimentoacute durante treinta antildeos con laquochochos y caacutescaras de naranja hecho tan raro como increiacuteble Cuando fallecioacute reparaban las monjas en ponerle una vara de azucenas porque habiacutea sido casada y aquellas flores aparecieron milagrosamente sobre el cadaacuteverraquo (Serrano y Sanz 269 553)

Otra limentildea del primer cuarto del siglo XVII con reputacioacuten de santa fue Dontildea Luisa Melgarejo En este caso no se trata de una religiosa de oficio sino de la mujer del doctor Juan de Soto La uacutenica diferencia es que dontildea Luisa al parecer teniacutea laquovisiones y reve-lacionesraquo lo que debioacute poner nervioso a maacutes de un miembro del tribunal del laquoSanto Oficioraquo que consideraron sus escritos laquoculpadosraquo De su papel de laquosantaraquo pasa por lo tanto al de laquoposesaraquo o laquoendemoniadaraquo El inquisidor de Lima Gaitaacuten escribioacute un infor-me donde a traveacutes de la opinioacuten puacuteblica y de otras averiguaciones se deciacutea que dontildea Luisa Melgarejo laquomujer santaraquo sabiacutea cuando las almas de los difuntos saliacutean del Purga-torio El diacutea 14 de noviembre de 1623 se decidioacute tomar posesioacuten de todos los cuadernos en los que habiacutea escrito las experiencias de todos sus laquoarrobos suspensiones extasis y revelacionesraquo Estos cuadernos una vez recogidos presentaron toda una serie de al-teraciones borrones adiciones enmiendas incluso diferente letra por lo que despueacutes de haber sido examinados resultaron culpables145 Excelente imaginacioacuten debioacute tener dontildea Luisa Melgarejo la suficiente al parecer para convencer a algunos miembros de la iglesia de que en sus escritos laquohabiacutea algoraquo que mereciacutea la pena Estas cosas ocurriacutean en Lima uno de los centros culturales maacutes importantes de la vida social y poliacutetica en la Ameacuterica espantildeola Lima a comienzos del siglo XVII seguacuten el empadronamiento llevado

145 Serrano y Sanz 270 47 Veacutease J T Medina Historia del tribunal del Santo Oficio de la Inquisicioacuten de Lima (1569-1820) (Santiago Imprenta Gutemberg 1887) Tomo II 34-41

167ESPANtildeOLAS DE ULTRAMAR EN LA HISTORIA Y EN LA LITERATURA

a cabo en 1614 por el marqueacutes de Montesclaros era una ciudad de 25000 habitantes de los que 11000 eran espantildeoles El nuacutemero de religiosos y religiosas llegaba a 1720 (Pittaluga 77)

Se sabe que en la Isla de Santo Domingo durante el siglo XVI nacioacute o al menos resi-dioacute una poeta de ceacutelebre apellido en los aconteceres del Nuevo Mundo Dontildea Elvira de Mendoza de la que se conserva un manuscrito en la Real Academia de la Historia laquoCantares miacuteos que estaacuteis rebeladosraquo Eugenio de Salazar hace un elogio de ella como poeta en un Soneto a la ilustre Poeta y Sentildeora Dontildea Elvira de Mendoza moradora en la ciudad de Santo Domingo (Serrano y Sanz 270 53)

Nacida en Burgos sobre el antildeo 1590 dontildea Luisa de Padilla merece un lugar aparte dentro del grupo de mujeres escritoras de su eacutepoca Por su estilo faacutecil y castizo su no-vedad de pensamientos y su rica erudicioacuten recibioacute el siguiente comentario de Manuel Serrano y Sanz laquoPocas figuras hay en nuestra historia literaria femenil que puedan compararse a esta eminente prosista acaso la maacutes notable de cuantas florecieron en Es-pantildea durante el siglo XVIIraquo (Serrano y Sanz 270 95-96) Este comentario y comparacioacuten deberiacutea ampliarse para que tambieacuten incluyese a laquola historia literaria varonilraquo

Dontildea Luisa fue defensora de la labor que la Inquisicioacuten estaba realizando en la laquolim-piezaraquo de mujeres laquosoldados del demonioraquo que existieron en algunas provincias espa-ntildeolas en aquel tiempo Muchas de las mujeres que combinaban la magia con los po-deres curativos fueron condenadas no solamente por hombres de la Inquisicioacuten sino tambieacuten por mujeres de todas las clases sociales como es el caso de Luisa de Padilla condesa de Aranda En su obra Elogios de la verdad e invectiva contra la mentira preveniacutea contra aquellos que practicaban artes en contra de la religioacuten cristiana La magiacutea negra seguacuten Padilla era la causante de que muriesen casi tantas personas como otras causas naturales habieacutendose descubierto hasta seis mil brujas en Vizcaya y Guipuzcua con-fesando una mujer de un pueblo pequentildeo haber matado con su laquomagiaraquo a ochocientas personas (Perry 31) Eran estos laquomales de ojoraquo y maldiciones seguacuten la autora las causas de que se secasen los pechos de las madres lactantes que se separasen las parejas casa-das y que abortasen las embarazadas (Perry 31)

Si se tiene en cuenta que dontildea Luisa estuvo emparentada con la maacutes rancia aristocra-cia de su tiempo o lo que es lo mismo con algunos de aquellos que en cierta manera dirigiacutean los destinos de Espantildea en aquella eacutepoca (Duques de Lerma Duque de Uceda Marqueacutes de Cueacutellar Conde de Santa Gadea Marqueacutes de Belmonte por citar algunos) se comprenderaacute mejor su identificacioacuten con una institucioacuten que en teoriacutea velaba por la salvaguarda de los valores laquoeternosraquo de una Espantildea destinada a ser la campeona del ca-tolicismo durante los siglos XVI y XVII El padre de dontildea Luisa fue don Martiacuten de Padilla y Manrique extraordinario militar que proboacute su valor contra enemigos moriscos ingle-ses holandeses piratas berberiscos y el renegado genoveacutes Muley Faxad Fue veterano de la batalla de Lepanto donde apresoacute a cuatro galeras y acompantildeoacute con su escuadra a la reina Dontildea Margarita de Austria cuando vino de Geacutenova en 1598 laquoHabiacutea obtenido a 24 de julio de 1587 el tiacutetulo de Conde de Santa Gadea y en 1596 el de Capitaacuten General de la Armada del mar Oceacuteanoraquo (Serrano y Sanz 27095-96)

Por otra parte tambieacuten se sabe que dontildea Luisa participoacute directamente y desde tem-prana edad en la praacutectica de algunas actividades intelectuales como la historia y la arqueologiacutea a la vez que dedicaba su tiempo a virtudes cristianas como la caridad y el socorro de los necesitados (Serrano y Sanz 270 97) Resulta mucho maacutes faacutecil compren-

168 JUAN FRANCISCO MAURA

der la postura ideoloacutegica de esta gran mujer si tienen en cuenta ademaacutes de los factores antes mencionados otros tantos de caraacutecter biograacutefico concernientes a su educacioacuten y matrimonio

Otra escritora fue la mexicana dontildea Mariacutea Casilda Pozo natural de Temestla (Meacutexi-co) Nacida en el mes de abril de 1682 dejoacute escrita su biografiacutea en 16 cuadernos el ma-nuscrito original se encuentra en la biblioteca del colegio de San Gregorio de Meacutexico Fue su confesor el jesuiacuteta Domingo Quiroga que fue quieacuten la incitoacute a escribir su obra (Serrano y Sanz 270 137) Sor Juana de San Antonio aparece a principios del siglo XVII formando parte de un grupo de religiosas espantildeolas que fueron a Manila por la ruta de Meacutexico Ademaacutes de distinguirse por sus cualidades personales su obra interesa por ofrecer informacioacuten testimonial y costumbrista acerca de la forma de vestir de chinos y japoneses (Serrano y Sanz 270 225)

Otra monja esta vez ecuatoriana fue Gertrudis de San Ildefonso Nacida en 1652 profesoacute su vocacioacuten en el convento de Santa Cruz de Quito dejando escrita su vida por mandato de su confesor el padre Martiacuten de la Cruz el cual hizo una biografiacutea laquoen tres gruesos voluacutemenesraquo Gertrudis de San Ildefonso murioacute en 1709 (Serrano y Sanz 270 300) en olor de santidad

Sor Mariacutea Ana Agueda de San Ignacio nacioacute el 3 de marzo de 1695 en la dioacutecesis de la puebla de los Angeles en un rancho del lugar de Santiago Tecaliacute (Serrano y Sanz 270300) Esta monja mexicana escribioacute varias obras durante su vida conventual a lo largo de la cual desempentildeoacute el cargo de priora por muchos antildeos Entre sus obras todas de caraacutecter piacuteo y de laquoamor divinoraquo escribioacute un curioso y laquocopiosoraquo tratado de la Leche virginal de la Soberana Madre de Dios El padre Fr Juan de Villa Saacutenchez hace el siguiente comentario al respecto laquoen que hablando primero en sentido natural de los beneficios que debemos a Nuestra Sentildeora pasa a tratar en sentido miacutestico y alegoacuterico enten-diendo en la leche la doctrinaraquo (Serrano y Sanz 270301) Mexicana fue tambieacuten Sor Petronila de San Joseacute que ejercioacute como abadesa del Real monasterio de Jesuacutes Mariacutea de la ciudad de Meacutexico Escribioacute Vidas de varias religiosas ejemplares obra que tiene su im-portancia ya que al parecer laquoDe esta obra se sirvioacute D Carlos de Siguumlenza y Goacutengora para escribir su Parayso Occidental (Meacutexico 1684) seguacuten eacutel mismo declara en el proacutelogo diciendo lsquoa quien si hay algo bueno en esta historia se le debe todorsquoraquo (Serrano y Sanz 270 354) Menos conocida fue su compatriota Sor Luisa de Santa Catalina natural de Xacona laquopueblo situado en las inmediaciones de Zamora (Meacutexico)raquo siendo bautizada en 1682 Escribioacute Cartas espirituales a su confesor el P Juan Loacutepez de Aguado (Serrano y Sanz 270 361-62)146

Todos estos escritos la mayoriacutea de ellos ignorados por el gran puacuteblico tienen la im-portancia de darnos una perspectiva diferente En otras palabras ensentildearnos la maacutes refinada sensibilidad de muchas mujeres que permanecieron y en su mayoriacutea siguen permaneciendo a laquooscurasraquo de una eacutepoca tan rica de la literatura espantildeola como fue el Siglo de Oro Este siglo fue tambieacuten en su dimensioacuten literaria y artiacutestica patrimonio de la mujer

146 Para profundizar en muchas de estas escritoras hispano-americanas la consulta de la Biblioteca Hispano-Americana de Beristain de Souza resulta de capital importancia

169ESPANtildeOLAS DE ULTRAMAR EN LA HISTORIA Y EN LA LITERATURA

Sor Nada ardores divinos de una monja adolescente escritos ineacutedi-tos de una recieacuten profesa del siglo XVI147

iexclQueacute encantadores son tus amores hermana miacutea espo-sa iexclQueacute deliciosos son tus amores maacutes que el vino Y el aroma de tus perfumes es mejor que el de los baacutelsamos Miel virgen destilan tus labios esposa miel y leche hay en tu lengua y el perfume de tus vestidos es como aroma de incienso (Cantar de los Cantares 4 10-11)

Sor Nada llamada asiacute por humildad seguacuten dice el Indice de manuscritos de la Biblio-teca Nacional de Madrid es uno de los ejemplos maacutes desconocidos e interesantes que tenemos de la poesiacutea y prosa amoroso-religiosa del siglo XVII Hasta la fecha nunca se habiacutea publicado su obra e incluso hasta el antildeo 1995 para mi sorpresa no habiacutea copias microfilmadas de sus manuscritos en la Biblioteca Nacional Serrano y Sanz en su libro Apuntes para una Biblioteca de Escritoras Espantildeolas hace una escueta y pasajera mencioacuten de esta mujer y de su obra (68-69) siendo eso todo lo que hasta ahora se sabiacutea de ella Sus escritos consisten en los siguientes manuscritos

1 laquoEn queacute consiste un verdadero amor de Diosraquo 9 hojas uacutetiles en 4ordm letra del siglo XVII Biblioteca Nacional de Espantildea Manuscrito 1295926

2 laquoPintura del Propio Amorraquo laquoPintura del propio Amorraquo 10 hojas uacutetiles en 4ordm letra del siglo XVII Biblioteca Nacional de Espantildea Manuscrito 1295927

3 laquoEsplicacioacuten sobre en queacute consiste la paz del Almaraquo laquoQuartillas aacute un Alma que padece soledad interiorraquo 7 hojas uacutetiles en 4ordm letra del siglo XVII Biblioteca Nacio-nal de Espantildea Manuscrito 1295828

En cuanto a su persona soacutelo se nos dice que laquose encubrioacute con este seudoacutenimo laquoSor Nadaraquo Esta monja desconocida de origen hispanoamericano posee toda la frescura e ingenuidad de una joven apasionada metida por vocacioacuten u obligacioacuten a ejercer la profesioacuten maacutes comuacuten para mujeres de cierta clase social de su tiempo En sus liacuteneas podemos encontrar un misticismo simple incluso en algunos momentos infantil pero a su vez lleno de una fuerza y sensualidad interior poco comuacuten en escritos de este geacute-nero que desborda los liacutemites del laquoamor divinoraquo a traveacutes de los diaacutelogos entre el Alma y el Esposo Sor Nada consigue proyectar su amor a Dios maacutes allaacute de una experiencia romaacutentica Su experiencia es sincera y genuinamente miacutestica trascendiendo la imita-cioacuten o la propia creacioacuten poeacutetica ficcionalizada (Hatzfeld 30) Algunos pasajes son de un

147 Veacutease mi artiacuteculo Sor Nada ardores divinos de una monja adolescente escritos ineacuteditos de una monja profesa del siglo XVIIraquo Espeacuteculo Revista de estudios literarios 26 (2004) 1-10 Universidad Complutense de Madrid http wwwucmesinfoespeculonumero26sornadahtml

170 JUAN FRANCISCO MAURA

alto contenido eroacutetico con sustantivos y metaacuteforas que recuerdan la maacutes iacutentima unioacuten amorosa en unos casos y el tierno amor maternal en otros

[T]e miro Jesus mio desnudo a las inclemencias del tiempo y ardien-do en puro fuego de Amor por la salud de las Almas y me ensentildeas a que te ame con todo mi corason y puresa de espiritu No atendiendo ni buscando umanos intereses ni a solisitar consuelos ni regalos espi-rituales que suelen empantildear la puresa del noble corason No mi Jesus amable pues antes me ensentildeaste tu puro Amor que desnudo sean [sic] de encaminar mis passos desde el pesebre asta la cuna en donde te miro tan desnudo como el pesebre y todo Sentildeor por mi Amor (Mss 12959 26 hoja 1 v)

El manuscrito (12959 27) de la mencionada serie de tres contiene algunas correccio-nes quizaacute hechas por el confesor o quizaacute por ella misma cuando se dirige con excesiva familiaridad y arrebatado fervor a su Amado148 He escogido el manuscrito (12959 Caja 28) en primer lugar por ser el ejemplo maacutes representativo de su poesiacutea y prosa En este manuscrito encontramos de forma maacutes directa que alegoacuterica toda la frescura de un diaacutelogo entre Jesuacutes y el alma que raya como diriacutea Cervantes laquoa la llana y sin rodeosraquo (667 lib 2 cap 38) con el doloroso y a veces desesperado deseo de la entrega y la unioacuten final con el Amado La ortografiacutea no ha sido corregida respetaacutendose el texto ori-ginal149 Veamos el siguiente fragmento

Mira que te amo con Amor de padre y con Amor de esposo el mas fino y puro enamorado que no tan solo me presio de darte mi mano sino tambien todo mi cuerpo y sangre para que con mi pan de vida te sustentes y te regales a tus anchuras y que con mi propio espiritu vivas en paz como tu lo deseas y que mis amores sean unico alivio en tus trabajos en esta mortal vida pues si esto es asi y sabes que muero por darte vida dime esposa mia de que te fatigas Dame querida tus bras-sos y dime si me amas como yo te amo (Hoja 4)

148 La antologiacutea de Promis ha procurado insertar entre los textos antoloacutegicos algunos que se refieren a la es-critura de mujeres fundamentalmente de aquellos generados en el interior de los espacios conventuales Estos textos se fundan como laquohistorias de vidasraquo y responden casi siempre a los requerimientos de los confesores de las monjas coloniales En este sentido resulta valiosiacutesima la incorporacioacuten de la llamada Relacioacuten autobiograacute-fica de Sor Ursula Suaacuterez como una muestra significativa de la escritura monjil entendida en esta eacutepoca (como tambieacuten en la tradicioacuten europea medieval) inserta en las denominadas laquolabores de manoraquo de las religiosas ya que el texto escrito por mandato se convertiacutea en una suerte de entramado o tejido linguumliacutestico es decir en un nuevo bordado que la mayor parte de las veces el confesor convertido en censor iba haciendo tachando y enmendando En la antologiacutea Promis agrega un texto de Sor Tadea Garciacutea de la Huerta titulado Relacioacuten de la inundacioacuten que hizo el riacuteo Mapocho de la ciudad de Santiago de Chile en el monasterio de Carmelitas titular de San Rafael el diacutea 16 de junio de 1783 se trata de un poema tipo romance escrito en versos octosilaacutebicos y que da cuenta de lo sucedido ese diacutea en el convento (Resentildea de la literatura del reino de Chile de Joseacute Promis Eddie Morales Pintildea httpwwwupaclpublicaciones2002literatura_promishtm)

149 Son frecuentes las faltas ortograacuteficas Una de ellas es el uso constante del seseo La ausencia de acentua-cioacuten y puntuacioacuten exceptuando alguacuten punto o coma arbitrario no seguido casi nunca de mayuacutescula inicial lo mismo que el uso igualmente aribitrario de la h o de b v r q g j m n x etc No olvidemos de la misma forma la laxitud linguumliacutestica existente en el siglo XVII (no sabemos a queacute parte de eacuteste pertenece el manuscrito) asiacute como la joven edad de la monja

171ESPANtildeOLAS DE ULTRAMAR EN LA HISTORIA Y EN LA LITERATURA

Los versos del presente manuscrito poseen la misma fuerza que tiene su prosa Con una estructura estroacutefica indefinida estaacuten aparentemente corregidos por alguien que tu-vo la oportunidad de conocer personalmente a la autora Muy probablemente se trate del padre al que hace referencia al principio del primer manuscrito laquoMandame el Pd que le declare en que consiste un verdadero amor a Diosraquo a continuacioacuten continuacutea con su caracteriacutestica humildad laquo[O]bedesere y dire lo q Dios me inspire segun mi rudesa y simplisidadraquo (Mss 12959 26) En cuanto a la fuerza pasional de esta joven observamos con cierta tristeza coacutemo aparece sublimada en sus escritos con toda la enegiacutea de una joven mujer llena de intensidad y vida pero encerrada en los liacutemites de un convento Veamos un ejemplo en donde responde el Alma en los siguientes versos

O mi enamorado Jesus O mi dulse y tierno amanteO alegria de los sielos O dulse Jesus amable

(Toda Sentildeor me derrito toda Sentildeor me desagoy quiero vivir por ti ea sentildeor abrasadme) [Tachado en el original]

Toda Sentildeor me derrito toda Sentildeor me desagoy quiero morir por vos ea Sentildeor que ya acabo

Ya tus amores me llaman ya tus perfumes me traencon suspiros y agonias Sentildeor hasta que te alcanse

O mi Jesus amoroso no puedo mas dilatarmeya la pasiensia me falta dulse Jesus abrasadme

(No puedo vivir sin vos no puedo mas dilatarmeya la pasiensia me falta dulse) [Tachado en el original]

No puedo vivir sin vos mi dulse Jesus amablepues me teneis echisada siendo mi esposo y mi Padre

Ay que me abraso Ay que me quemo del Amor deJesus nasareno como no tocan y tantildeen a fuego150

Estos versos llenos de arrebato sublimado conectan con toda la tradicioacuten miacutestica es-pantildeola que se remonta a Ramoacuten Llul y que culmina en el maacutes universal de nuestros

150 En toda la fuerza y simbologiacutea del amor maacutes iacutentimo del maacutes alto y sublime placer de la unioacuten de los amantes tal como lo encontramos en el Cantar de los Cantares y en San Juan de la Cruz Leemos en la Biblia

Ya me he quitado la tuacutenica iquestCoacutemo volver a vestirme Ya me he lavado los pies iquestCoacutemo volver a ensuciarlosMi amado metioacute su mano por el agujero (de la llave) y mis entrantildeas se estremecieron por eacutel Me levanteacute para abrir a mi amado Mis manos destilaron mirra y mis dedos mirra exquisita en el pestillo de la cerradura (5 3-5)

Nos ocurre lo mismo con San Juan de la Cruz en su insuperable poema laquoLlama de amor vivaraquo

iexclOh cauterio suaveiexclOh regalada llagaiexclOh mano blanda iexclOh toque delicadoque a vida eterna sabey toda deuda pagaMatando muerte en vida la has trocado

172 JUAN FRANCISCO MAURA

miacutesticos San Juan de la Cruz Esta tradicioacuten se extiende hasta finales del siglo XVII esto es hasta los finales del Barroco siendo un poco maacutes tardiacuteo en la Ameacuterica espantildeola Sin tener como propoacutesito discutir en el presente trabajo a queacute corriente miacutestica pertenece la obra de Sor Nada es necesario resaltar no obstante el hecho de que estaacute escrito por una mujer y ademaacutes de tierna edad El manuscrito 12959 Caja 26 termina con estas pa-labras laquo[T]odas estas boverias escrivi por entretenimiento siendo resien profesa en la religion Sor Nadaraquo Mas no por la juventud de su autora los escritos dejan de tener lo-gradas metaacuteforas imaacutegenes y siacutembolos sacados de la naturaleza La alegoriacutea de la unioacuten matrimonial poseeacute el fuego liacuterico de la maacutes apasionada de las relaciones amorosas vivi-ficada por perfumes flores insectos animales escarchas nieves o abrojos Por lo tanto aunque la narracioacuten destile cierta ingenuidad no carece por ello de un vocabulario rico con el sabor popular de la poesiacutea de los cancioneros y romances de tradicioacuten renacen-tista No ha sido otra mi intencioacuten que la de rescatar del olvido unos escritos en prosa y en verso llenos de frescura y espontaneidad que nos muestran la pasioacuten con que la joven novicia se laquoentrega en cuerpo y almaraquo a los menesteres de su profesioacuten guiada por un padre espiritual en esos primeros antildeos de formacioacuten Esta ha sido la razoacuten por la que presento a continuacioacuten el citado manuscrito en su totalidad

Sor Nada (Mss 1295928)

laquoEsplicacion sobre en que consiste la paz del AlmaraquolaquoQuartillas a un Alma que padece soledad interiorraquo

[7 hojas utiles en 4ordm letra del siglo XVII]

+

Esplicacion sobre en que consiste la paz del Alma

Pareseme segun mi rudo entender que la verdadera paz del Alma con-siste en una muy pura y buena consiencia en un corason liso y bien intensionado en una verdadera rectitud de espiritu en el qual el Alma procura bolar a Dios sin jamas detenerse a respetos umanos ni reparar en que me diran ni de que me censuraran sino me apresuro a seguir a unos entenderes y pareseres dorados en los quales pretende el mundo engantildear y ensuciar si se puede la puresa de un corason unicamente de Dios y de su Santa ley y se lo conserva cristalino con la divina asis-tencia de la gracia y comprendido de su Amor y temor siguiendo la luz divina de tan amante Sentildeor Dios y ombre verdadero con que este ilustrado corason ni se altera ni se mueve por los disfrasses dorados que ase el mundo y sus moradores mayormente con falssas amistades aunque con ellos muestre buena intension Con la misma grasia y luz de Dios conose el buen corason estos disfrasses que le ase el mundo y se retira de todo con espiritu y valor esto sin la menor alterasion sino que en suma paz se retira a buscar a Dios dentro de su mismo corason

173ESPANtildeOLAS DE ULTRAMAR EN LA HISTORIA Y EN LA LITERATURA

y se abrasa con su pura verdad en la qual se le descubren mil interio-res secretos tan solidos puros y verdaderos que la misma Alma queda abismada y de puro grandes no los puede bien comprender ni esplicar pero estos mismos secretos divinos le sirven de espuelas para no solo correr sino bolar con pies de plumas en seguimiento de su bien ama-do Jesus y como este soberano Sentildeor es tan amante de sus espossas las Almas luego que la ve bolar con pies de plumas la sale al encuen-tro en despoblado campo que se deve de llamar Campo de Amor de Dios y el mismo Sentildeor se viene a las manos por ser Dios que nos ama con Amor infinito de Padre benigno y amoroso con que asiendose en contra deso este divino enamorado en lo interyor de el Alma que le busca con ansias de servirle y amarle y en aquella soledad traban una conversasion amorosa y sensilla como la pluma simple de quien esto escrive

Divino enquentroDios y el Alma en la soledad

O Soberano Principe de la paz dise el Alma tus perfumes me traen a ti bolando porque alla en el mundo y sus valedores me pretendian engantildear y entretenerme con pegaminossas amistades que facilmen-te me pudieran envenenar y matarme apartandome de ti Mi dulse Jesus amable mi Redentor Soberano que con tantas ansias me sales al enquentro como siervo [ciervo] erido de mis Amores los quales tu Amor me ofrese para que con tu mismo Amor te ame y te sirva en paz sin perturbarme ni contristarme ni cansarme de padeser pasando si se ofrese por escarchas nieves espinas ni abrojos ni por otros diverssos trabajos ni piedras de contradision que tu me puedes permitir pues por mas que el mar se levante con sus ferosses olas contra mi ni piedras se me tiren al rostro en todo Sentildeor me quieres con serenidad pasifica sin la menor perturbasion Todo Sentildeor quieres que lo tome con Serenidad de espiritu y asi vengo a ti bolando para que mejor me ensentildees a vivir segun las leyes de tu noble condision que me son muy agradables por mas que el mundo me las despresie por segir sus vanidades y torsidas intensiones con apariensias de bien y con este engantildeo y bien me quie-ro mas a mi que no a mi proximo veo que segun mi pareser se pierden muchas Almas y tambien de aquellos que se depresian y pasan por muy espirituales Con que me paresen pocos los que llegan a padeser con desnudes151 de espiritu por tu purisimo Amor y me parese essas se quedan muy atrasadas en la virtud por el peligro de bolver muy atras el paso de modo que se pueden despentildear y pereser en su misma desgra-sia ya por soberbia o por otras enfermedades que se les pega al corason y asi lo pasan como siegos ignorantes sin advertir en sus peligros

151 La letra en cursiva es miacutea

174 JUAN FRANCISCO MAURA

este aquerdo Sentildeor y otros que tu verdad me ensentildea me ase venir uyendo de las paredes del mundo y me vengo a ti Dios mio bolando con las dos Alas del Amor y temor que tu mismo Amor me ofrese tan de gracia y tan de grado que no se duentildeo mio con que lo responder a tan soberano beneficio y finesa de tus entrantildeas de Amorvengo Sentildeor y esposo mio unicamente a descansar en ti pues los peli-gros del camino me an puesto en mucho sobresalto temiendo el per-derte y sin ti perderme para siempre por una eternidad sin fin pues deseo amado mio ganarme ganandote a ti y vivir en ti aora en vida y despues eternamente y estos cuidados me traen fatigada molida y cansada y no podre tener alivio y descanso sino viendome entre tus brassos aunque sea estando en cruz pues ese es el fin de mis deseos vivir y morir en ti ablame mi cordero manso y ensentildeame a que ver-daderamente te ame como fiel esposa ea mi caro amigo dame la ma-no pues sabes Amor mio que en mi no ay mano sin tu misma mano y asi mi Dios y Sentildeor mi Principe Soberano con umilde rendimiento y deseos de alcansarte te suplico me des la mano y me consueles en estos mis trabajos Deseo Sentildeor vivir en paz y los malos amores de mi Naturaleza flaca no me dejan detentar y no quieren por mi desgrasia atropellar con las leyes de tu Amor ni quisiera perturbar mi corason quando me veo con un torvellino de olas y contratiempos que a menu-do me suelen sercar pero si tu Sentildeor me das la mano nada temo sino que me aseguro y vivire en paz sin que me fatiguen los contratiempos pues mi mano en la tuya y mi espiritu en el tuyo por mas borrascas que me envistan no seran bastantes para rendir mi voluntad a la suya bien si para pronunsiar un fiat que resuene bien atras en tus oidos y que en medio de mis fatigas me ponga a cantar tus divinas misericor-dias hea Sentildeor ya pretendo serrar mis labios por no desir mas bove-rias y deseo Sentildeor oir tus palabras de vida eterna abla Sentildeor que tu sierva oye con atension y cuydado mira mi Dios que se me ase tarde y espero con prisa deseando saborearme y aprovecharme de los ecos de tu Santa dotrina pues todas tus palabras saben a eterna vida callen pues mis sentidos y potensias y todo se ponga en paz pues mi dulse y soberano Sentildeor no se escusara de ablar me aun que en mudo silensio hea mi gran Prinsipe de la paz ablame que tus puros amores me traen perdida por estos asperos montes y mis cortos pasos no te pueden dar alcanse mirame mi Dios a tus pies postrada como un vil gusano y me-nor ormiga de la tierraabla Jesus y dise a su esposa el Alma querida esposa mia que me pides y por que te muestras tan fatigada y mal sufrida no vives como corde-rita del campo buscando de mis pechos el sustancial pasto mi Amor no te sustenta y mi grasia te promete eterna vida pues dime amada de que te fatigas y te muestras mal sufrida mira que te amo con Amor de padre y con Amor de esposo el mas fino y puro enamorado que no tan solo me presio de darte mi mano sino tambien todo mi cuerpo y

175ESPANtildeOLAS DE ULTRAMAR EN LA HISTORIA Y EN LA LITERATURA

sangre para que con mi pan de vida te sustentes y te regales a tus an-churas y que con mi propio espiritu vivas en paz como tu lo deseas y que mis amores sean unico alivio en tus trabajos en esta mortal vida pues si esto es asi y sabes que muero por darte vida dime esposa mia de que te fatigas Dame querida tus brassos y dime si me amas como yo te amoResponde el Alma152 Tu mi Dios sabes si yo te amo pues de mi solo se que mis deseos y ansias buelan a ti mas no alcanso a saber si te amo como tu de-seas ser amado y como desconfio tanto de mi y de mis prosederes falssos temo Dios mio perderme y perderte y asi Sentildeor pues no desechas mis Amores y te muestras tan fino en amarme te pido me ensentildees a vivir segun las leyes de tu pura verdad y fina condisionhija mia dise Dios la prueva de un verdadero Amor consiste en sufrir callar y padeser por mi unico Amor y en todo seguir mis pasos sin ja-mas retroseder por mas fragoso que se muestre el camino pues nunca seran tantas las espinas las escarchas ni las nieves ni los vientos bo-rrascosos que te se ofrescan pasar por mi Amor como los que mi tierno y desinteresado Amor paso por ti y siempre con mis pies descalssos y asi hija y esposa mia muestrate costante en seguir lo perfecto de mis passos pues mi braso fuerte sera en ti y peleara por ti y te sera el todo en tus nesesidades y mi Amor te convertira en dulse y suave lo amargo y molesto a la condision de la carrne

Responde el Alma

O mi enamorado Jesus O mi dulse y tierno amanteO alegria de los sielos O dulse Jesus amable

(Toda Sentildeor me derrito toda Sentildeor me desagoy quiero vivir por ti ea sentildeor abrasadme) [Tachado en el original]

Toda Sentildeor me derrito toda Sentildeor me desagoy quiero morir por vos ea Sentildeor que ya acabo

Ya tus amores me llaman ya tus perfumes me traencon suspiros y agonias Sentildeor asta que te alcanse

O mi Jesus amoroso no puedo mas dilatarmeya la pasiensia me falta dulse Jesus abrasadme

(No puedo vivir sin vos no puedo mas dilatarmeya la pasiensia me falta dulse) [Tachado en el original]

No puedo vivir sin vos mi dulse Jesus amablepues me teneis echisada siendo mi esposo y mi Padre

152 La aparicioacuten de una mayuacutescula al principio de una oracioacuten es algo totalmente arbitrario en este ma-nuscrito dada la libertad ortograacutefica de la autora Como se puede observar en la mayor parte de las veces no es el caso

176 JUAN FRANCISCO MAURA

Ay que me abraso Ay que me quemo del Amor deJesus nasareno como no tocan y tantildeen a fuego

Responde Jesus Hija mia tus simples vozes oygo y aunque resuenan bien a mis oidos pero te deseo mas mansa y pasifica en tus fervores ya sabes que no siempre as de vivir en mantillas ni a los pechos de tu Madre por que es rason que padescas con espiritu fuerte como mu-jer valerosa por que a una esposa del Rey soberano y prinsipe de la paz no le estan bien chiquerias ni fervores de nintildea malcriada y ya es ora que la destete su Madre la Naturaleza y que empesando su nueva vida camine con el favor de mi grasia sigiendo mis passos de eterna vida esto con sus pies descalssos segun mis leyes de Amor puro y desinteresado lo tienen ordenado153 y vivir en paz como lo deje en-cargado a mis apostoles Santos repitiendoles varias vezes Vivir en pas y caridad esto es un vivir en Dios y Dios en el Alma y asi hija mia el Alma que vive en paz vive en mi Como mis cortesanos en el cielo y pues me pides que te ensentildee a vivir segun las leyes de mi condision Repito el desir que te debes mostrar sufrida en todo tiempo y estado sin permitir en tu corason que ni aun los fervores se adelanten con estremos ni ademanes sino atiende y aprende de mi purisima Madre pues siempre la veras si bien lo consideras que mientras vivio en el mundo en todos sus trabajos se mostro firme fuerte costante como piedra diamante Pues mirandome nintildeo entre sus brasos desnudo en el pesebre desnudo y crusificado en los brassos de una cruz En estos y otros passos no se mudo su rostro sino que en suma serenidad y pasifico corason toda se sacrificaba enteramente en los brassos de mi Amor y rendido su corason y voluntad en la de mi eterno Padre por ejemplo te la doy y deseo que aprendas de sus nobles calidades pues te aseguro carisima que las leyes de mi condision y pura verdad todo lo allaras enserrado en el corason de mi purisima Madre sedle fiel y descansaras en paz

+

Quartillas a un alma que padese soledad interior

1Un Alma afligida y tristese ve en un campo desiertay en el su esposo la tieneAtormentada y sedienta

153 Es a traveacutes de estas liacuteneas lo que hace suponer que la autora de este diaacutelogo amoroso entre el Alma y Je-suacutes es novicia esto es laquoque estaacute empesando su nueva vidaraquo En las mismas liacuteneas una vez maacutes se hace alusioacuten al laquodesteteraquo de su vida civil laquoa una esposa del Rey soberano y principe de la paz no le estan bien chiquerias ni fervores de nintildea malcriada y ya es ora que la destete su Madre la naturalesaraquo (fol 5)

177ESPANtildeOLAS DE ULTRAMAR EN LA HISTORIA Y EN LA LITERATURA

2Pendiente se ve en el AyreSolo un hilo la sustentasin tocar el pie en el sueloporque del no tome tierra

3Mirandola esta yto a ytoaquel sol que la atraviesay la enviste con sus rayosmas ella no pestantildeea

4Como sigarra padese y como a tal se atormentabatiendo sus mismas Alasy el corason se atraviesa

5Con penas sustos temoresquando se mira assi mesmasin tener valor en nadaporque es la misma flaquesa

6Pero el Amor de su esposotoda su atension le llevay la pone en un abismopero cubierto en tiniebla

7Desea dar algun bueloy subir con ligeresapero se mira travadacon una fuerte cadena

8Clama suspira y padeseMas del todo se sujetaRindiendo su voluntadA la divina clemencia

9Los enemigos del AlmaCruelmente le asen guerray ella aunque firme y constantelos reselos la atormentan

178 JUAN FRANCISCO MAURA

10de todos modos padeseaunque gosa la asistensiadel divino esposo amadoque en su interior se recrea

11Solo de verla penary con verla tan serenadise resibe mil gustosde su sigarra pequentildea

12Le sabe el mundo a mil yelesy su trato le atormentaviendo en el mil falsedadesque todas saben a tierra

13Para poderse librardeja de correr y buelacon las Alas del Amory el mismo Amor se la lleva

Una vida dedicada a un amor divino un amor que le haraacute llenar un buen nuacutemero de cuartillas dedicadas a tan alta empresa Se desconoce si la vocacioacuten de Sor Nada con-tinuoacute con tanta intensidad el resto de sus diacuteas Ciertamente la vida en el covento no era faacutecil En algunos casos la experiencia era traumaacutetica incluso fatal para algunas de las adolescentes de la Ameacuterica Espantildeola Las reglas del claustro eran severas por varias razones Estas joacutevenes si no teniacutean el permiso de la superiora no podiacutean recibir visitas no podiacutean volver a sus casas su correspondencia era censuraba y no podiacutean salir del periacutemetro conventual Igualmente se levantaban antes del amanecer para oir misa tra-bajaban el resto del diacutea y lo maacutes interesante es que muchas veces esta vida era aceptada por muchas

Page 13: Tercera parte: Mujeres en la vida intelectual - …parnaseo.uv.es/Editorial/Maura/TerceraParte.pdf · La Biblia, por su parte, hace repetidas menciones de la mujer y sobre el comporta-

143ESPANtildeOLAS DE ULTRAMAR EN LA HISTORIA Y EN LA LITERATURA

La educacioacuten de los indiacutegenas americanos fue una sincera preocupa-cioacuten de los reyes de Espantildea casi desde el descubrimiento del Nuevo Mundo Entre las primeras instrucciones de los Reyes Catoacutelicos a sus gobernadores de las Islas Antillas figuran las dadas a Nicolaacutes de Ovan-do en 1503 ordenaacutendole levantar en cada pueblo una escuela junto a la iglesia laquoen la que todos los nintildeos que hubiere en cada una de dichas poblaciones se junten dos veces al diacutea para que alliacute el capellaacuten les ensentildee a leer y a escribirraquo (Vega 9-10)

En la obra renacentista de Cristoacutebal de Villaloacuten El Crotaloacuten se ofrecen unas imaacutegenes muy graacuteficas de las mujeres de la eacutepoca y del laquoexceso de libertadraquo que seguacuten el autor en boca de uno de sus personajes disfrutaban Desde el punto de vista antropoloacutegico y social las siguientes liacuteneas ofrecen una buena imagen de la apariencia fiacutesica de las mujeres de su tiempo y de su actitud vista desde la perspectiva parcial del personaje de la obra

Pues aun no pienses Demophon que la vanidad y perdicioacuten destas livianas mujeres se le ha de pasar a Dios sin castigo que yo te oso afirmar por cosa muy cierta y que no faltaraacute Que por ver Dios su disolucioacuten desenvoltura desverguumlenza y poco recogimiento que en ellas en este tiempo hay visto que asiacute viacutergenes como casadas viudas y solteras todas por un comuacuten viven muy suelta y muy disolutas en su mirar andar y meneo muy curiosas y que por la calle van con un cu-rioso paso en su andar descubierta su cabeza y cabello con grandes y deshonestas crenchas muy alto y estirado el cuello guintildeando con los ojos a todos cuantos topan haciendo con sus cuerpos lascivos meneos (Villaloacuten 860-61 vol 2 canto 20)

El pasaje antes citado pese a parecer humoriacutestico en nuestros diacuteas no lo era tanto en la eacutepoca en que fue escrito ya que la visioacuten de la mujer como parte integrante del pa-trimonio del padre o del marido podiacutea de alguna manera poner en juego laquola honraraquo de su posesor Pese a esto se aprecia como la mujer teniacutea cierto margen de libertad que no se limitaba a las caacutemaras de un convento o a una vida totalmente alejada del mundanal ruido En la siguiente cita continuacioacuten de la anterior se puede observar la serie de ac-cesorios y aderezos que las mujeres de la eacutepoca utilizaban en sus vestidos y cuerpos llamando la atencioacuten la complejidad y sofisticacioacuten de los atuendos descritos

Por esta su comuacuten deshonestidad se cierto que vendraacute tiempo en el cual ha de hacer Dios un gran castigo en ellas pelarse han todos sus cabellos hacieacutendolas a todas calvas y seraacute tiempo en que les quitaraacute Dios todos sus joyeles sortijas manillas zarcillos collares ajorcas y apretadores de cabeza Quitarles ha los partidores de crenchas tenaci-cas salsericas redomillas y platericos de colores y todo geacutenero de afei-tes sahumerios guantes adobados sebos y unturas de manos y otros olores Alfileres agujas prendedores Quitarles ha las camisas muy del-gadas y los manteos vasquintildeas briales saboyanas nazarenas y rebo-cinos y en lugar de aquellos sus cabellos encrespados y enrifados les daraacute pelambre y calvez y en lugar de aquellos apretadores y joyeles

144 JUAN FRANCISCO MAURA

que les cuelgan de la frente les daraacute dolor de cabeza y por cinta de ca-deras de oro muy esmaltadas y labradas les daraacute sogas de muy aacutespero esparto con que se cintildean y aprieten y por aquellos sus muy curiosos y suntuosos ataviacuteos de su cuerpo les daraacute siacutelici y desta manera haraacute Dios que lloren su lascivia y desorden y que de su lujuria y deshonestidad hagan grave penitencia Entonces no habraacute quien las quiera por su he-diondez y miseria en tanto que siete mujeres se encomendaran a un varoacuten y eacutel de todas huiraacute menospreciaacutendolas y aborrecieacutendolas como de gran mal (Villaloacuten 860-61 vol 2 canto 20)

Excelente lista de aderezos femeninos de los cuales pocos son reconocibles en nues-tros diacuteas Gran frustracioacuten debiacutea de tener con las mujeres el autor de estas liacuteneas sien-do al parecer muy poco correspondido por estas uacuteltimas La misoginia que aparece en estas liacuteneas refleja cierta ingenuidad La mujer que se nos presenta debioacute de ser bastante atractiva y sofisticada portando una gran variedad de adornos muchos de ellos de origen oriental y de perfumes que poco tendriacutean que envidiar a los de la mujer moderna En Descripcioacuten breve de toda la tierra del Peruacute Tucumaacuten Riacuteo de la Plata y Chile obra escrita en Chile entre 1603 y 1609 por el padre Reginaldo de Lizarraga nacido en Medelliacuten (Espantildea) en 1545 y trasladado a Ameacuterica a los quince antildeos vemos una asombrosa semejanza con la cita anterior En esta obra del padre dominico dedicada al entonces presidente del Consejo de Indias conde de Lemos observamos coacutemo su descripcioacuten de la vestimenta de las mujeres de Lima ofrece notables semejanzas con la escrita unos antildeos antes en Espantildea En su capiacutetulo 51 titulado laquoDe los vestidos de las mujeresraquo dice lo siguiente

Lo que en esta ciudad [Lima] se admira mucho y aun lo que se ha-biacutea de refrenar es los vestidos y trajes de las mujeres son en esto tan costosas que casi no se sabe como lo pueden sufrir sus maridos La soberbia de ellas es demasiada y no sabemos en lo que han de venir a parar plegue a Dios y no sea en lo que pararon aquellas de quien dice Nuestro Sentildeor Porque las hijas de Sioacuten se ensoberbecieron (esto es las ciudadanas) cuando saliacutean de sus casas llevaban las gargantas ex-tendidas los ojos altos a una y otra parte guintildeaacutendolos los pasos muy compuestos el Sentildeor las volveraacute calvas y les raeraacute los cabellos de sus cabezas les quitaraacute sus chapines y jerbillas bordadas las medias lunas rodetes las cadenas y collares de oro las ajorcas los tocados costosos los punzones de oro para partir las crenchas los zarcillos y los olores los anillos y piedras preciosas etc y por los olores seles daraacute muy pes-tilencial olor y por las cintas de oro sogas de esparto etc No creo yo hay en lo descubierto del mundo ciudad en su tanto ni cuatro veces mayor que a tanta soberbia en este particular como esta nuestra ciu-dad [Lima] llegue acueacuterdome que los antildeos pasados maacutes ha de treinta y ocho que llegando un religioso nuestro de Espantildea nacido y criado en Toledo a nuestro convento de esta ciudad cerca de la fiesta de Cor-pus Christi tratando de ella y de la suntuosidad majestad y riqueza que aquel diacutea en Toledo en calles y ventanas se mostraba le deciacuteamos que no nos espantase porque en nuestra ciudad veriacutea coacutemo no le ha-

145ESPANtildeOLAS DE ULTRAMAR EN LA HISTORIA Y EN LA LITERATURA

ciacutea mucha ventaja Toledo Llegoacute la fiesta vio la riqueza que se mostroacute en los vestidos de las mujeres adornos de ventanas altares y calles dijo que la riqueza de Toledo en este diacutea mostrada no haciacutea muchas ventajas a la de esta ciudad Pues es cierto que hay tanta diferencia de entonces ahora en lo que vamos tratando como de vestidos de aldea a vestidos de corte con justo tiacutetulo se podriacutea moderar por los virreyes esta soberbia pero no seacute por queacute no se modera y siacute seacute por queacute ni los maridos no tienen aacutenimo para moderarlo ni los gobernadores tampo-co (Lizarraga 38 lib 1 cap 51)

Seriacutea injusto y exagerado afirmar que los descubrimientos transoceaacutenicos se hicieron por la presioacuten que ejercieron las mujeres sobre sus amantes para que estos les trajesen laquomaacutes raacutepidamenteraquo todo ese laquosin finraquo de delicadezas exoacuteticas de todo tipo que existiacutean en el Oriente Lo que siacute es cierto es que las mujeres fueron grandes consumidoras de perfumes afeites sedas joyas y otros bienes suntuarios siendo muy conscientes de lo que hoy entendemos como laquomodaraquo Martiacuten Fernaacutendez de Navarrete en su indispensa-ble trabajo sobre los primeros viajes transoceaacutenicos Coleccioacuten de los viajes y descubrimien-tos menciona de paso la situacioacuten de algunas mujeres durante el siglo XV Es precisa-mente esta eacutepoca en la cual portugueses y castellanos entran en conflicto por el control de algunas posesiones en las costas africanas

y crecioacute el lujo a tal extremo que aun las mujeres de los menestrales y artesanos se confundiacutean en los vestidos con las de alto linaje y esta-do usando ropas de ricas telas de seda de oro de lana con forros de martas y pieles y con guarniciones de oro plata y aljoacutefar cuyo gasto por ser ruina de las familias se tratoacute de corregir aunque sin efecto en las Cortes de Palenzuela (M Fernaacutendez de Navarrete 75 21)

El mismo autor resalta la importancia que tuvo para el comercio de Castilla el contar con una buena armada que protegiese a los barcos de piratas y otros peligros Gracias a los inventarios que se han conservado del duque de Beacutejar y de don Alvaro de Zuacutentildeiga conocemos el lujo de estos sentildeores en perlas orientales piedras preciosas telas y demaacutes utensilios de gran valor134 Existe una Real Pragmaacutetica de Fernando el Catoacutelico a Diego Coloacuten en donde aparece nuevamente la conciencia que se teniacutea sobre la manera de ves-tir que deberiacutean llevar las damas castellanas

R PRAGMAacuteTICA SOBRE EL VESTIR Y GASTAR SEDA EN LAS IN-DIAS Valladolid 12 de noviembre de 1509 Don Fernando etc A vos Don Diego Coloacuten nuestro Almirante y Gobernador de las Indias del mar Oceacuteano y a otro cualquier mi Gobernador etc Sepades que yo he sido informado de los muchos gastos y costas que se han hecho y facen y se esperan hacer si yo no lo mando proveer y remediar en el vestir y gastar de las sedas y brocados y bordados en la Isla Espantildeola y en las otras islas y poblaciones de las dichas islas del mar Oceacuteano tra-yendo en ello mucho desorden y yo por el amor y voluntad que tengo

134 AGI Indiferente 418 Libro 2 fol 87v Publicada en DH Am Tom 6 paacutegina 191 DIA Tomo 31 pag 470 DIU Tomo 5 paacuteg 166 Seguacuten la RC a Diego Coloacuten fechada a 14 de noviembre de 1509 es la pragmaacute-tica que se guarda en Castilla sobre la manera de vestir (DIU Tomo 5 paacutegina 174)

146 JUAN FRANCISCO MAURA

a esas dichas Indias y a los pobladores dellas y porque deseo que ellas se aumenten y acrecienten por las haber ganado y descubierto por la gracia de Nuestro Sentildeor con nuestra industria trabajo y costa y los po-bladores dellas no hagan sobre lo suso dicho tan excesivos gastos sino pues que van a ellas con deseo y voluntad de se ayudar y aprovechar del oro que por gracia de Nuestro Sentildeor se descubre de cada diacutea se detengan en lo gastar en semejantes cosas para se aprovechar dellos en otras cosas que maacutes les convenga asiacute para sus personas como para sus haciendas y por evitar y excusar lo suso dicho mandeacute lo platicar con algunos de mi Consejo y por ellos visto se halloacute que porque nuestros suacutebditos y naturales que viven y estaacuten en dichas Indias no gasten sus haciendas en semejantes desoacuterdenes y que las conserven y guarden pa-ra sus menesteres y por el bien y el pro comuacuten de todos generalmente mando dar esta mi carta premaacutetica sancioacuten la cual quiero y mando que haya fuerza y vigor de ley bien ansiacute y a tan cumplidamente como si fuese fecha y promulgada en Cortes por lo cual ordeno y mando que en cuanto a mi merced y voluntad fuere ninguna ni algunas personas de cualquier ley estado condicioacuten que sean que estuvieren de morada o vivienda o en otra cualquier manera en la dicha Isla Espantildeola y en las otras islas desas dichas Indias y tierra firme no puedan traer y traigan ropa alguna de brocado ni de seda ni de chamelote de seda ni zarzahaacuten ni tercenel ni tafetaacuten ni vainas ni correas de espada ni en cinchas ni en sillas ni en alcorques ni en cosa alguna ni tampoco puedan traer ni trai-gan bordados de seda ni chapado de plata ni de oro de martillo ni fila-do ni tejido ni de otra cualquier manera pero que las personas que tu-vieren en las dichas Indias bienes asiacute muebles como raiacuteces que valgan hasta la cuantiacutea de mil castellanos que ellos y los hijos que tuvieren de hasta edad de catorce antildeos traigan jubones y caperuzas y bolsas y ribe-tes y pestantildeas de seda de cualquier color que quisieren con tanto que en una ropa no traigan maacutes de un ribete y que no haya en los dichos ribetes y pestantildeas maacutes anchura de cuanto un dedo pulgar y que no se traiga en los ruedos de las ropas y que puedan traer becas de tercenel y de tafetaacuten y de papahigos de camino aforrados en el mismo tercenel y tafetaacuten y ansiacute mismo permitimos que puedan traer de seda las cora-zas y guarnecer las faldas y gocetes y capacetes y baberas y quejotes y traer cojines de seda en la silla de la jineta y que las mujeres de las tales personas que tuviesen bienes en la dicha cuantiacutea de los dichos mil castellanos y sus hijas siendo doncellas puedan traer gonetes y corseacutes y fajas de dos varas de largo de seda y [borradas dos letras por mancha de tinta] mas y de lo de vestir y mudar cuando quisieren y por bien tuvieren quier sea moyil o faldilla o cota o haacutebito u otra cualquier ropa con tanto que juntamente no puedan vestir ni vistan maacutes de una ni les pongan trepas ni tiras de seda ni de brocado ni de oro tirado ni tejido ni relido ni en las ropas de pantildeo pongan cortapisas ni lisonjas ni trepas ni tiras ni otra guarnicioacuten alguna de seda ni de brocado salvo que puedan traer un ribete o pestantildea de seda de anchura de un dedo pulgar asiacute en

147ESPANtildeOLAS DE ULTRAMAR EN LA HISTORIA Y EN LA LITERATURA

las ropas de seda como en las de pantildeo en los ruedos de las faldas y para las costuras y no otra cosa alguna y que no traigan la dicha seda en las guarniciones de las mulas ni en angarillas ni en sillas ni en pantildeos ni en otra cosa alguna y que ansiacute mismo no puedan traer mantillas de seda ni enforradas en seda sopena que l que contrario hiciere pierda las ro-pas que ansiacute trujere vestidas por primera vez y sea repartido la mitad para el juez que lo juzgare y la otra mitad para el juez que lo acusare y por la segunda que pierda la ropa y se parta como dicho es y sean desterrados de la isla donde viviere para dos antildeos y por cuanto algu-nas personas de los que nuevamente destos reinos de Castillaa van a se avecindar y poblar y estar en las dichas Indias y son de honra acae-ce que no llevan tantos bienes que valgan la dicha cuantiacutea de los mil castellanos que mando que tengan los que hubieren de traer seda en la manera que dicha es que a eacutestos tales no se entienda y extienda lo suso dicho y que puedan traer la dicha seda seguacuten y en la manera que dicha es y no maacutes hasta tanto que haya un antildeo que estaacuten en las dichas Indias que corra y se cuente desde el diacutea que llegare fasta ser cumplido y que siacute cumplido no tuviere bienes que valgan la dicha cuantiacutea de los dichos mil castellanos que no puedan traer seda ninguna so la dicha pena de suso contenida la cual mando a vos las dichas nuestras justi-cias y a cada una de vos que esta mi carta y todo lo en ella contenido y cada cosa y parte dello guardeacuteis y cumplaacuteis y ejecuteacuteis por manera que se cumpla y ejecute lo en ella contenido so pena de perdimiento de los oficios y que seades inhaacutebiles para haber otros semejantes y que pagueis la estimacioacuten de la tal ropa que dejardes de ejecutar y para que lo susodicho sea notorio y ninguno dello pueda pretender ignorancia mando que esta mi carta sea pregonada puacuteblicamente por las plazas y mercados y otros lugares acostumbrados desas dichas islas por prego-nero y ante escribano puacuteblico(Konetzke Coleccioacuten 23)135

Tambieacuten se sabe de las joyas que Rodrigo Ponce de Leoacuten marqueacutes de Caacutediz debioacute dar a dontildea Beatriz Pacheco (M Fernaacutendez de Navarrete 75 22) Lo que siacute queda claro es que la navegacioacuten seraacute a partir de estos antildeos la forma maacutes raacutepida e importante para comerciar con aquellos paiacuteses de Oriente que antes soacutelo era posible alcanzar a traveacutes de rutas terrestres Existe un documento muy representativo de este periodo sobre la posesioacuten de joyas de gran valor por parte de miembros de una de las familias maacutes repre-sentativas residentes en Ameacuterica Los protagonistas son en este caso el almirante Diego Coloacuten y su mujer Mariacutea de Toledo Dice el documento que El jurado Antoacuten Bernal y Juana de Hoces su mujer vecinos de Sevilla en la collacioacuten de Santa Cruz reciben de Diego Coloacuten Almirante de las Indias laquoun joyel muy rico de oro de hechura de escudo que tiene en medio una piedra preciosa grande esmeralda e debaxo de la dicha piedra un rostro de aacutengel labrado en el mismo oro esmaltado e a cada lado del dicho rostro una piedra preciosa diamante pura y debaxo una piedra gruesa pendiente que pesa el dicho

135 AGI Indiferente 418 Libro 2 fol 87v Publicada en DH Am Tom 6 paacutegina 191 DIA Tomo 31 pag 470 DIU Tomo 5 paacuteg 166 Seguacuten la RC a Diego Coloacuten fechada a 14 de noviembre de 1509 es la pragmaacutetica que se guarda en Castilla sobre la manera de vestir (DIU Tomo 5 paacutegina 174)

148 JUAN FRANCISCO MAURA

joyel con todo lo susodicho medio marcoraquo Los citados Antoacuten Bernal y su esposa se dan por pagados de todo lo que se les adeudaba y se obligan a su vez a devolver el joyel al Almirante si este les paga en dinero El 23 de agosto de 1530 siete antildeos despueacutes la virreina canceloacute la anterior obligacioacuten y recuperoacute el mencionado joyel (AHPS Libro del antildeo 1523 Oficio I Escribaniacutea Alonso de la Barrera Folio 1173 Fecha 3 de diciembre) En la misma casa del almirante otra mujer Briolanga Muntildeiz su tiacutea materna se obliga a pagar al mercader genoveacutes Batista Catantildeo 22 ducados de oro laquopor cierto raso que le comproacute y habiacutea de ser pagado en el puerto de Santo Domingoraquo (AHPS Libro del antildeo 1509 Oficio V Libro uacutenico Escribaniacutea Francisco Esquibel Folio Primer tercio del lega-jo Fecha 9 de marzo) Dontildea Briolanga recibiacutea cada antildeo para su mantenimiento 100000 maravediacutes del almirante mayor de las Indias por medio de Gaspar Gurricio monje del monasterio de Santa Mariacutea de las Cuevas (AHPS Libro 1510 Oficio XV Libro II Es-cribaniacutea Bernal Gonzaacutelez Vallesillo Folio primer tercio del legajo Fecha 4 de julio) Resulta interesante hacer notar la temprana presencia (1516) de un ingleacutes en Santo Domingo involucrado igualmente en la compra de telas Se trata de laquoNicolas Arnoteraquo residente en Santo Domingo que debe pagar a Mariacutea Caldera mujer del comendador Diego Barbosa el valor de una cama de sargas de colores de Flandes (AHPS Libro del antildeo 1516 Oficio XV Libro II Escribaniacutea Bernal Gonzaacutelez Vallesillo Folio Primer tercio del legajo Fecha 28 de agosto) Sin embargo anteriormente a esa fecha (1514) encontramos a un veneciano casado con una inglesa mucho maacutes ceacutelebre en sus viajes trasoceaacutenicos laquoSevastiaacuten Cavotoraquo capitaacuten del rey don Fernando y vecino de Sevilla136

De forma paralela se observa tambieacuten un cierto desenvolvimiento de la mujer en su medio lo que equivaliacutea a intercambios de informacioacuten a todos los niveles incluyendo por lo tanto el cultural No era extrantildeo que tuviesen libros de comedias a mano y que llegasen incluso a escribir comedias ellas mismas Efectivamente la sospecha de que las damas llegasen a escribir comedias estaba bien fundada Veacuteanse algunos ejemplos Ana Caro Malleacuten de Soto una de las maacutes famosas dramaturgas de la Sevilla del siglo XVII autora de El conde de Partinupleacutes utiliza el tema del amor en sus maacutes diversas variantes fiacutesicas y espirituales como el eje de casi todas sus obras (Perry 57) Este hecho por otra parte indica el favor del puacuteblico ante un tema tan popular Veacutease otro ejemplo

The drama of this period did not present love and marriage as a simple partnership however and many dramatists contrasted laquoprofaneraquo with laquohonestraquo love Feliciana Enriacutequez de Guzmaacuten who wrote Tragicome-dia Los jardines y campos sabeos in Seville in the early seventeenth cen-tury presented the hero Clarisel as the victim of laquopervertedraquo and fickle Belidiana in part 1 so blinded by her beauty that he feels himself laquoin shackles and in chainsraquo (Perry 57)

Pero las damas espantildeolas de esta eacutepoca no soacutelo escribiacutean comedias algunas tambieacuten se aventuraron a escribir tratados cientiacuteficos Uno de estos casos fue el de Oliva Sabu-co de Nantes Barrera que a finales del siglo xvi escribioacute un tratado meacutedico sobre la naturaleza humana advirtiendo que la lujuria podiacutea perjudicar al cuerpo Se basaba en

136 Sebastiaacuten Caboto o laquoSevastiaacuten Cavotoraquo estaba casado con Juana Cavoto vecina que fue de la ciudad de Londres en la parroquia de San Gil (AHPS Libro del antildeo 1514 Oficio I Libro II Escribaniacutea Mateo de la Cuadra Folio 253 Fecha 14 de Septiembre) citado en CFAAPS Vol 3 doc 128 p 37

149ESPANtildeOLAS DE ULTRAMAR EN LA HISTORIA Y EN LA LITERATURA

la presuncioacuten de que la lujuria provocaba que el cerebro emitiese un liacutequido que iba al estoacutemago enfriaacutendolo y debilitaacutendolo interrumpiendo de esta manera las funciones vitales (Perry 58)

Se sabe que en la eacutepoca de Isabel la Catoacutelica habiacutea muchas mujeres estudiantes y que la propia reina las impulsaba a estos menesteres iniciativa que obtuvo sus frutos en las deacutecadas siguientes Ademaacutes de las conocidas novelistas Mariacutea de Zayas y Sotomayor y dontildea Mariana de Carvajal existioacute toda una serie de escritoras de todos los geacuteneros lite-rarios que florecieron a ambos lados del Atlaacutentico y que no solamente llaman la aten-cioacuten por su nuacutemero sino por la calidad de sus obras Algunas de ellas como dontildea Luisa de Padilla condesa de Aranda calificada por Serrano y Sanz como laquola maacutes notable de cuantas florecieron en Espantildea en el siglo XVIIraquo personificaraacuten a la perfeccioacuten a este tipo de mujeres Tambieacuten deberiacuteamos saber cuaacutentas seriacutean las mujeres que escribieron con pseudoacutenimos masculinos

La informacioacuten sobre las diferentes facetas de la vida femenil con que contamos no es abundante A pesar de todo podemos hacernos una idea maacutes clara de la verdadera situacioacuten de la mujer a traveacutes de una nueva interpretacioacuten de los textos tanto de los medievales como de las croacutenicas de los primeros antildeos del descubrimiento y conquista Algunos estudios relativamente recientes surgidos por el intereacutes general que suscita todo lo concerniente a la mujer han ayudado a considerar nuevas perspectivas La eru-dicioacuten moderna estaacute poniendo en tela de jucio los estereotipos tradicionales en cuanto a la pasividad y relevancia femeninas asiacute como al tradicional misogenismo que se atri-buye a la eacutepoca medieval Cada vez estaacute maacutes claro que la existencia de estas mujeres variaba considerablemente seguacuten la eacutepoca posicioacuten social o situacioacuten geograacutefica por lo que hacer valoraciones categoacutericas sobre laquola situacioacuten de la mujerraquo puede llevar a graves equivocaciones (Dillard 9) Es fundamental para comprender a la mujer espa-ntildeola que pasoacute al Nuevo Mundo tener en cuenta las enormes diferencias de todo tipo que existieron en la sociedad castellana y novomundista Un pintoresco ejemplo es el de laquolas tapadasraquo una usanza de origen aacuterabe que se pondriacutea de moda en Castilla poco despueacutes de la toma de Granada por los Reyes Catoacutelicos y que despueacutes pasariacutea al Peruacute Esta tradicioacuten ha perdurado en algunos pueblos de Espantildea hasta relativamente poco tiempo pueblos como Mojaacutecar (Almeriacutea) y Vejer de la Frontera (Caacutediz) son ejemplo de esta costumbre tambieacuten conocida como el de las laquocobijaacutesraquo

Tras la caiacuteda del reino musulmaacuten de Granada en 1492 la corona espa-ntildeola prohibioacute a las mujeres aacuterabes de Andaluciacutea vestir los velos islaacutemi-cos que cubriacutean sus rostros y ocultaban su identidad No era faacutecil des-arraigar esta costumbre tan ancestral y secular y el emperador Carlos asiacute como su hijo el rey Felipe II tuvieron que repetir la prohibicioacuten Cuando finalmente las moras fueron obligadas a abandonar sus velos y a adoptar el chal castellano comenzaron a utilizar la nueva prenda para cubrir sus rostros dejando al descubierto soacutelo uno de los ojos Esta nueva moda en el uso del chal tradicional nos asegura leoacuten Pi-nelo era extremadamente graciosa sensual y atractiva a causa de la belleza exoacutetica de los ojos de las moras Las mujeres cristianas de Granada Coacuterdoba y Sevilla imitaron pronto la nueva moda de llevar el chal y asiacute nacioacute la laquotapadaraquo hispana Desde Sevilla la nueva moda

150 JUAN FRANCISCO MAURA

fue a las colonias de ultramar y tomoacute raices especialmente en el Peruacute (Martiacuten 317-18)

En un reciente estudio sobre la educacioacuten de la mujer en la Ameacuterica virreinal apare-cen algunos ejemplos significativos de mujeres espantildeolas que consagraron gran parte de sus vidas a la tarea docente Dentro del proceso educativo de las espantildeolas que fueron a las Indias destaca el papel de dontildea Catalina de Bustamante Joseacute de Jesuacutes Vega y Ma-riacutea Luisa Caacuterdenas de Vega dicen en su obra Ameacuterica Virreinal La Educacioacuten de la mujer que esta mujer pocos antildeos despueacutes del descubrimiento del Nuevo Mundo se dedicoacute a trabajar en favor de los indios aunque por desgracia su nombre y sus hechos en la labor docente hayan sido ignorados por los historiadores modernos (Vega 12-13)

Son varias las veces que se nombra a Catalina de Bustamante en el citado estudio y varias las fuentes antiguas en que se recoge la presencia de tan distinguida laquomatrona muy honrada y de buen ejemploraquo de la que ya hablaba Zumaacuterraga y sobre la que se hizo un informe enviado a Carlos V describiendo sus actividades en la Nueva Espantildea firmado por cuatro de los misioneros maacutes conocidos de Meacutexico

El informe dice que los franciscanos de Texcoco acababan de cons-truir un nuevo monasterio y cedido el antiguo A una honrada y honesta y muy virtuosa matrona que se dice Catalina de Bustamante para que ende instruyese a las hijas de los sentildeores de la comarcala cual con el favor de Dios y limosnas que don Hernando [Corteacutes] les haciacutea para su sustentacioacuten [teniacutea en esa casa-hogar] hasta trescientas mujeres antes maacutes que menos (Vega 14)

Estas laquocasas-hogarraquo no estaban regentadas necesariamente por monjas sino por lo que llamaban laquobeatasraquo mujeres que sin estar estar sujetas a la autoridad eclesiaacutestica se dedicaban a un laquolucro honestoraquo Llamadas tambieacuten laquobeateriosraquo eran diferentes a los conventos de monjas y constituiacutean las primeras escuelas de la mujer en la Nueva Espa-ntildea (Vega 20-21) Fue gracias al ejemplo de mujeres como Catalina de Bustamante que dedicaron sus vidas a la educacioacuten de los indiacutegenas que existiesen otras continuando su ejemplo Motoliniacutea dice claramente que laquode ese primer encerramiento (el de Texcoco regentado por Catalina) salieron otras honestas y muy virtuosas duentildeas que ensentildeaban a las maacutes menudasraquo (Vega 23)

Pero dontildea Catalina de Bustamante pese a ser una singular mujer y la iniciadora de la educacioacuten de la mujer en Meacutexico no fue un caso aislado corresponde maacutes bien a un patroacuten al que se ajustaron muchas de las pioneras de la Nueva Espantildea que sembraron instituciones de educacioacuten de la mujer En 1530 unos antildeos maacutes tarde aparecioacute una de las grandes protectoras de la instruccioacuten femenina en Ameacuterica La emperatriz Isabel de Portugal (Vega 24)

Desde comienzos de la conquista fueron varios los centros docentes regentados por mujeres en los que la ensentildeanza no estaba impartida por monjas Una de las institucio-nes maacutes sobresalientes del sistema educativo fue el Colegio de Nintildeas que se establecioacute en la ciudad de Meacutexico a principios del siglo XVI con maestras que no eran monjas Estas seglares conocidas comunmente como laquomigasraquo eran las descendientes de las antiguas beatas Su ubicacioacuten permanente fue determinada en 1548 lugar que serviriacutea de escue-la ininterrumpidamente hasta 1862 cuando el edificio fue convertido en bodega (Vega 60) No se debe perder de vista que no soacutelo por el hecho de llevar una vida secular se

151ESPANtildeOLAS DE ULTRAMAR EN LA HISTORIA Y EN LA LITERATURA

gozaba de maacutes privilegios Era maacutes bien al contrario En las carreteras las mujeres segla-res no inspiraban el mismo respeto que las monjas que ademaacutes teniacutean contacto cons-tante con personas de los dos sexos no pertenecientes a la Iglesia (Arenal 297) Ademaacutes dentro de las murallas del convento desapareciacutean muchas de las barreras sociales que limitaban a la mujer de esta eacutepoca

La presencia femenina y la monarquiacutea

Pues iquestcoacutemo sabes tuacute preguntoacute don Quijote que los grandes llevan detraacutes de siacute a sus caballerizos Yo seacute lo direacute respondioacute Sancho Los antildeos pasados es-tuve un mes en la corte y alliacute vi que paseaacutendose un se-ntildeor muy pequentildeo que deciacutean que era muy grande un hombre le seguiacutea a caballo a todas las vueltas que daba que no pareciacutea que era su rabo Pregunteacute que coacutemo aquel hombre no se juntaba con el otro sino que siempre anda-ba tras deacutel Respondieacuterome que era su caballerizo y que era uso de grandes llevar tras siacute a los tales Desde enton-ces lo seacute tan bien que nunca se me ha olvidado (Cervan-tes Don Quijote)

Los monarcas espantildeoles fueron conscientes de que sin la presencia femenina difiacute-cilmente se podriacutea solidificar una conquista a todos los niveles La mayor parte de los virreyes y altos cargos trajeron a sus mujeres con ellos y en las ciudades principales de Hispano-Ameacuterica como la ciudad de Meacutexico Guatemala Lima o Potosiacute habiacutea mujeres que disfrutaban de una esmerada educacioacuten (gramaacutetica latiacuten poesiacutea historia muacutesica) Esto dariacutea origen a una elegante y hasta cierto punto sofisticada sociedad en la que las mujeres tomaron parte en asuntos maacutes importantes que los que sus homoacutelogas toma-ran en las colonias portuguesas laquoThere were brilliant vice-regal courts at Mexico City and Lima far exceeding anything that could be found in Portuguese or English America during the seventeenth centuryraquo (Boxer 39) Las estadiacutesticas con las que contamos hoy no soacutelo demuestran que las mujeres llegaron al Nuevo Mundo en respetables porcen-tajes sino que ademaacutes tuvieron una participacioacuten activa llegando a intervenir en algu-nos casos en las liacuteneas de vanguardia Resulta difiacutecil aproximarse al estado de aacutenimo de aquellas mujeres que vivieron en eacutepocas tan lejanas Para ello es necesario indagar en los documentos de la eacutepoca para lograr rescatar del pasado todos esos tesoros de la historia muchas veces tergiversados y manipulados con el fin de que sirvan a propoacutesi-tos actuales Es en los viejos manuscritos donde queda testimoniada su presencia tan rica en dolores tragedias y por queacute no en amores Fue la llegada de estas mujeres una brisa de esperanza y de ilusioacuten para aquellos que ya estaban en las tierras de ultramar y

152 JUAN FRANCISCO MAURA

veiacutean venir de su propia tierra aquello que maacutes antildeoraban amantes madres hermanas Un haacutelito de vida y poesiacutea que suavizaba las costumbres de estos rudos y romaacutenticos pioneros laquoporque para ser hombres de tales empresas algo de romaacutentico debioacute de existir en ellos y que es tan propio del espantildeol y abandonariacutean en brazos tan gentiles sus bruscos modales que habiacutean adquirido en aacutespero contacto en selvas y montantildeasraquo (Villafantildee 125)

Hoy sabemos que en la normativa oficial de la Espantildea del siglo XVI y XVII se favoreciacutea el paso de mujeres al Nuevo Mundo Afirmar lo contrario no solamente es falso sino que implica un desconocimiento total de los primeros dos siglos de la colonizacioacuten espantildeola La presencia de estas mujeres espantildeolas fue efectiva laquolas disposiciones al respecto demuestran claramente que se teniacutea especial intereacutes en su arraigo y que se tra-taba de defender su posicioacuten de mujeres casadas con conquistadores y colonizadoresraquo (Villafantildee 126) Los monarcas comprendiacutean que era praacutecticamente imposible que los hombres viviesen sin mujeres y que de ser asiacute era de esperar que se cometiesen abusos con las indias lo que incidiriacutea en la moral social y en el buen gobierno de la colonia Ademaacutes sin un asentamiento definitivo con hogares y familias difiacutecilmente se podriacutea llevar a cabo una presencia permanente en las nuevas colonias (Orsquo Sullivan-Beare 45)

Empezando por los Reyes Catoacutelicos la preocupacioacuten de que en las colonias se esta-bleciesen nuacutecleos que tuviesen como base la familia cristiana fue clara Las capitulacio-nes que a este efecto se hicieron entre los conquistadores y la Corona fueron nume-rosas La efectuada entre Rodrigo de Baacutestidas y Carlos V puede ser un buen ejemplo Fechada en Valladolid el 6 de noviembre de 1524 muestra el propoacutesito de Baacutestidas de establecer una colonia permanente en la desembocadura del riacuteo Magdalena en el terri-torio que hoy vendriacutea a corresponder a Colombia El documento firmado por el Empe-rador comienza asiacute

El Rey Por cuanto por parte de vos Rodrigo de Baacutestidas vecino de la ciudad de Santo Domingo de la Isla Espantildeola Me fueacute fecha relacioacuten que por servicio de la Catholica Reyna Mi Sentildeora e Nuestro os ofre-ceacuteis de poblar e poblariades la provincia e puerto de Santa Marta que en Castilla de Oro llamada la Tierra Firme e que la poblariades dentro de dos antildeos siguientes haciendo en ella un pueblo en que no menos haya en eacutel al presente cincuenta vezinos que los quince de ellos sean casados y tengan consigo a sus mujeres y que lo teniades fecho dentro de dos antildeos y de hoy en adelante lo maacutes que fuese posible asiacute de cris-tianos espantildeoles como de indios (Restrepo 1 30)

De igual manera el priacutencipe Felipe (futuro Felipe II) en las capitulaciones establecidas en 1547 con Juan de Sanabria para que eacuteste fuese como gobernador y capitaacuten general de la dicha provincia escribe lo siguiente laquoPrimeramente que seais obligado e os obligeis a llevar destos Reynos de Castilla a la dicha provincia del Rio de la Plata cien casados con sus mujeres e hijos para poblar la dicha provincia y con ellos llevareis a vuestra muger e hijos (CDI de Ameacuterica y Oceaniacutea 23 119)

En numerosas ocasiones se pone de manifiesto el apoyo de la monarquiacutea a la emigra-cioacuten femenina tantas que difiacutecilmente se podriacutean enumerar todos los casos Lo cierto es que la legislatura vigente favoreciacutea la emigracioacuten y traslado de mujeres con toda una se-

153ESPANtildeOLAS DE ULTRAMAR EN LA HISTORIA Y EN LA LITERATURA

rie de alicientes137 sobre todo si eacutestas estaban casadas pasaje para llevar a las familias franquicia de derecho para los artiacuteculos que portasen consigo favoritismo en cargos destinos y contrataciones a aquellos que pasasen con sus mujeres incluyendo ademaacutes de los castellanos y leoneses a suacutebditos de otras partes de la corona incluso genoveses y portugueses si estos veniacutean acompantildeados de sus consortes (Fernaacutendez Duro 15-16)

Incluso se llegoacute a imponer penas a aquellos hombres casados que no llevasen a sus mujeres con ellos a Indias en el teacutermino de un antildeo El mismo emperador en una ceacutedula otorgada al virrey de la Nueva Espantildea le recomendaba que laquoprocurase persuadir a ca-sarse a los solteros que estuviesen en edad y situacioacuten de hacerloraquo prometieacutendoles que al efectuar el matrimonio seriacutean preferidos en el reparto de indios En la isla de San Juan de Puerto Rico los cargos oficiales y oficios puacuteblicos debiacutean de ser desempentildeados por los casados en primer lugar En Meacutexico ocurrioacute lo mismo con los cargos de corregido-res (Konetzke laquoemigracioacutenraquo 140-41) Felipe II al igual que sus antecesores y sucesores reiteraraacute y justificaraacute los beneficios de los que seraacuten acreedores aquellos que tengan allaacute a sus mujeres laquoque los que han servido en los descubrimientos de las dichas Indias y tambieacuten los que ayudan a la poblacioacuten dellas que tienen allaacute sus mugeres sean preferi-dos en los aprouechamientos qualesquierraquo mandando que despueacutes de los conquistado-res se tuviera en cuenta para la laquoprovisioacuten de los corregimientosraquo a los colonos casados siempre que estuvieran capacitados para dichos cargos (Konetzke laquoemigracioacutenraquo 141)

Las disposiciones en favor del matrimonio son claras ya sea por medio de un favo-ritismo manifiesto como en los casos antes citados o mediante medidas de cohercioacuten para que esta poliacutetica se llevase a cabo Don Sebastiaacuten Ramiacuterez de Fuenleal obispo de Santo Domingo y presidente de la Audiencia de Meacutexico propuso que a aquellos enco-menderos que no estuviesen casados y que no hubiesen tomado parte en la conquista se les quitase los indios concedidos con la obligacioacuten de devolveacuterselos si en el plazo de un antildeo habiacutean contraiacutedo matrimonio (Konetzke laquoemigracioacutenraquo 142-43) Por supuesto hubo excepciones a estas reglas En algunos casos ni la mujer teniacutea especial intereacutes en vivir junto con su marido en las Ameacutericas ni el marido queriacutea ir a buscar a su mujer pasado el plazo de un antildeo En el presente documento y de forma excepcional las auto-ridades reales protegen a los conyuges para que puedan seguir viviendo separados en continentes diferentes

Nuestras justicias de la ysla de Cubagua e otras qualesquier de las nuestras Yndias yslas e tierra firme del mar oceacuteano e a cada uno e qualquier de vos a quieacuten esta mi ceacutedula fuese mostrada por parte de Alonso de Tapia nuestro veedor de la provincia de Paria me ha sido hecha relacioacuten que ha mucho tiempo que reside en esas partes donde nos ha servido en lo que se ha ofrecido e que agora vos otros le apre-miaacuteis a que venga o embiacutee a estos Reinos por su muger lo cual no puede al presente hazer a causa de no ter posibilidad para ello a mi me ha suplicado vos mandase que no le compeliacuteesedes ny apremiaacutesedes a que viniese o enviase por la dicha su muger y dieacutesedes por libres los fiadores que tenyades para que dentro de un antildeo embiariacutea o verniacutea por

137 Reales Ceacutedulas de los antildeos 1502 y 1503 Academia de la Historia Coleccioacuten Muntildeoz tomo 75 fols 209 y 220 citado por Fernaacutendez Duro 15

154 JUAN FRANCISCO MAURA

ella o como la mi merced fuese lo cual visto por los de nuestro consejo juntamente con una peticioacuten presentada por dontildea Mariacutea Gudiel muger del dicho Alonso de Tapia por la cual nos suplica lo mismo que acor-dado que debiacutea mandar esta mi ceacutedula para vos por la qual vos mando que no compelaacuteis ni apremieacuteis al dicho Alonso de Tapia a que venga ni enviacutee a estos reinos por la dicha su muger si no fuere a que la pro-vea de lo que fuere necesario para su mantenimiento y deys por libres quales quier fianzas que sobre ello haya dado e no fagades ende al por alguna manera Firmado en la villa de Valladolid a VII diacuteas del mes de febrero de mil e quinientos e treinta y siete antildeos yo el licenciado Con-de de Samano y sentildealada del cardenal Beltraacuten y Carbajal [Aparte en letra pequentildea] Este diacutea se despachoacute una provisioacuten por la cuaacutel su Mag hizo merced a Alonso de Tapia de la veedoriacutea de la provincia de Paria por muerte de Garciacutea de Aguilar con las clausulas ordinarias y con el mismo salario que teniacutea Aguilar Firmado del emperador y de Beltraacuten y Bernal y Velaacutezquez El Rey (Registro de disposiciones Riacuteo Marantildeoacuten AGI Indiferente General Legajo 416 libro 2 Fols 94v y 95r)

El punto maacutes interesante a destacar de todas estas disposiciones oficiales en cuanto a la emigracioacuten femenina al Nuevo Mundo no es otro que la libertad que se da a la mujer de decidir si quiere o no casada o sin casar trasladarse al nuevo continente no como una imposicioacuten sino como un precepto laquoel espiacuteritu de las disposiciones en el sentido de asegurar la vida marital de los casados significa que la mujer que su marido invita a pa-sar a las Indias puede negarseraquo (Villafantildee 127) Habriacutea que ver las opciones laquorealesraquo ade-maacutes de las legales y econoacutemicas que le quedaban a la mujer si tomaba esta decisioacuten

El saber la libertad de eleccioacuten que estas mujeres teniacutean de antemano antes de aden-trarse en las interminables penalidades y aventuras que los viajes de la navegacioacuten tran-soceaacutenica suponiacutean hace que sus hechos y esfuerzos cobren auacuten maacutes relieve En nume-rosas ocasiones estas mujeres cruzaron el oceacuteano una y maacutes veces sin otro motivo que el de defender los derechos e intereses de los suyos Lo que resulta maacutes valioso de todo esto es que lo hicieran por propia iniciativa arriesgando sus vidas para que se hiciese justicia y para que no les faltase lo necesario a aquellos que estaban en la otra orilla Las autoridades vigentes conocedoras de los vaciacuteos legales existentes en las nuevas colo-nias se apresuraron a poner en vigor aquellas normas que redundaran en el beneficio de los menos favorecidos por las circunstancias La institucioacuten del matrimonio cuya trans-cendencia es fundamental en la vida juriacutedica y social de la mujer tuvo que ser legislada en Ameacuterica con una serie de nuevas disposiciones agregados modificaciones y aclara-ciones Asiacute pues la legislacioacuten de base espantildeola tuvo que sufrir en tierras americanas esta serie de cambios por motivos poliacuteticos y sociales (Villafantildee 126)

Para hacer un sumario de lo dispuesto hasta el siglo XVI en cuanto a la legislacioacuten de las mujeres que teniacutean familia o intereses en Indias merece la pena mencionar que existieron una serie de disposiciones que protegiacutean a las mujeres para que eacutestas no se viesen abandonadas por sus maridos En un epiacutegrafe de la Recopilacioacuten de 1680 (libro VII tiacutetulo 3) se deja ver claramente la preocupacioacuten de las autoridades en este asunto laquoDe los casados en Espantildea e Indias que estaacuten ausentes de sus mujeres y esposasraquo (Vi-llafantildee 126-27)

155ESPANtildeOLAS DE ULTRAMAR EN LA HISTORIA Y EN LA LITERATURA

La lista de disposiciones se hace interminable En los reinados de Fernando el Catoacute-lico Carlos V Felipe II Felipe III o incluso Carlos II la insistencia es constante La ra-zoacuten de esta insistencia seriacutea bastante obvia dado que con un oceacuteano por medio seriacutean muchos los que se aprovechasen de llevar una doble vida marital sin el estricto control y vigilancia de sus mujeres que se encontraban en la peniacutensula La ley XXVII libro IX tiacutetulo XXVI determina laquoDeclaramos por personas prohibidas para embarcarse y pasar a las Indias todos los casados y desposados en estos reinos lsquosino llevaren con ellos sus mujeresrsquo aunque sean virreyes oidores gobernadores o nos fuesen a servir en cual-quier cargo y oficios de Guerra Justicia y Hacienda porque es nuestra voluntad que todos los susodichos lleven a sus mujeresraquo (Villafantildee 127) laquoLos eclesiaacutesticos eran los en-cargados de dar cuenta a los tribunales competentes de aquellos que estando casados permaneciacutean en Indias sin sus mujeres Son reiteradas las disposiciones de Fernando el Catoacutelico en este sentidoraquo138 En 1514 el rey don Fernando ordena en una provisioacuten para la isla Espantildeola laquodoy licencia eacute facultad aacute cualquier persona naturales de estos Reynos para libremente se puedan casar con mujeres naturales de esa dicha ysla sin tener que incurrir por ello en pena algunaraquo (Villafantildee 129)

No se debe olvidar tampoco a aquellas mujeres que decidieron pasar a las laquonuevas tierrasraquo solteras Estas mujeres tambieacuten tuvieron un papel importante en el desarrollo de las nuevas colonias Los organismos espantildeoles del momento como los mandatarios indianos y todos los cronistas no dejaron pasar desapercibida la importancia social de estas mujeres en la poliacutetica de poblamiento laquo[E]s cierto que los pueblos de Indias nuevamente poblados no se tienen por fijos o estables ni permanentes hasta tanto que mujeres espantildeolas entren en ellos y los encomenderos y conquistadores se casen por muchas causas y respetos buenos y saludables que para ello hayraquo (Villafantildee 126-27)

Si la intencioacuten era la de una presencia permanente en las tierras americanas la mujer soltera que pasase a ellas siempre seriacutea un motivo maacutes para el colono o conquistador de continuar en el mismo suelo Se podriacutea empezar una familia si asiacute se quisiese sin tener que pensar en volver a la metroacutepoli ya fuese a disfrutar de los bienes adquiridos o a laquobuscarraquo una esposa El problema aparecioacute cuando se produjo un exceso de mujeres solteras lo que de alguna manera alteroacute la estructura social existente ya que no habiacutea muchas opciones para ellas aparte del matrimonio o el convento

En consideracioacuten a que la experiencia habiacutea demostrado que un exce-sivo nuacutemero de mujeres ejerciacutea perniciosa influencia sobre la moral y las costumbres se suplicaba al rey no otorgase a aquellas tantas auto-rizaciones para emigrar al Peruacute La ciudad de la Plata fundada en 1538 emite en 1577 un informe en el que se expone la urgente necesidad de que se funde un convento de monjas pues en el territorio de las Au-diencias de Los Charcas existiacutea un gran nuacutemero de muchachas que no pudieacutendose casar se hallaban en gran peligro de perderse (Konetzke laquoemigracioacutenraquo 149)

138 Solorzano Pereira Juan de Libro Primero de la Recopilacioacuten de las Ceacutedulas Reales Cartas y Provisiones y Or-denanzas Reales Noticia preliminar de Ricardo Levenne Universidad de Buenos Aires Facultad de Derecho Y Ciencias Sociales Pub del Instituto de Historia del Derecho Argentino Coleccioacuten de Textos y Documentos para la Historia del Derecho Argentino t V Buenos Aires Imp de la Universidad de Buenos Aires 1945 (Li-bro I Ley 10 laquoQue los Espantildeoles puedan casar con Indias y al contrario a su voluntadraquo t2 p 138 citado en Villafantildee 129

156 JUAN FRANCISCO MAURA

Entristece ver coacutemo se manejan las cifras de estas mujeres como si de ganado o de bienes suntuarios se tratase Por otra parte existieron irregularidades como la de pobla-doras espantildeolas que vivieron amancebadas con hombres que ya estaban casados en la peniacutensula Normalmente esto ocurriacutea cuando la estancia del conquistador se prolonga-ba maacutes de lo debido en lugares donde habiacutea pocas espantildeolas Muchas veces nacieron hijos de estas uniones que hicieron auacuten maacutes difiacutecil la situacioacuten para las mujeres que esperaban en Espantildea a un marido que ya no teniacutea ningunas intenciones de volver En los juicios de residencia los documentos acostumbran a citar estos casos ya que era parte de su obligacioacuten castigar las irregularidades extramatrimoniales y salvaguardar las buenas costumbres familiares que con tanto intereacutes se deseaba mantener laquoUn ejemplo nos lo da la isla de Cuba donde en 1532 viven con hombres casados Olalla Hernaacuten-dez Santillana Aranda lsquola Cordobesarsquo Catalina de Leoacuten Catalina Saacutenchez Francisca Hernaacutendez Mayor de Azebedo Juana de Valeros y lsquouna mujer que estaba en casa de Ayalarsquoraquo (Borges 416)

Estos casos no fueron aislados y mucho menos en Cuba centro neuraacutelgico de todo el movimiento de ida y vuelta entre la metroacutepoli y el Nuevo Mundo Estas ocho acusa-ciones por lo tanto no tienen porqueacute considerarse extraordinarias y menos en el lugar maacutes cosmopolita de las Indias en esos momentos al que llegaban flotas a cada momen-to Al parecer existieron casos parecidos en el Riacuteo de la Plata Peruacute y Nueva Espantildea (Ratcliffe 347) El margen legal para que estas mujeres viviesen como quisiesen estuvo limitado por una moral que veiacutea uacutenicamente en el matrimonio o el convento una salida laquovaacutelidaraquo para que fueran aceptadas socialmente Los hombres en iguales circunstan-cias fueron juzgados por una laquomoralraquo mucho maacutes permisiva

La mujer y el cuerpo eclesiaacutestico

Pues iquestquieacuten diablos os traiacutedo aquiacute dijo don Quijote siendo hombre de la iglesia iquestQuieacuten sentildeor replicoacute el caiacutedo laquomi desventuraraquo Pues otra mayor os amenaza dijo don Quijote sino me satisfaceacuteis a todo cuanto primero os pregunteacute (Cervantes Don Quijote )

Otro factor a tener en cuenta en un anaacutelisis sobre la presencia de la mujer en el Nuevo Mundo es el que tiene que ver con la institucioacuten maacutes importante de las que llegaron desde Europa la iglesia catoacutelica Sin aacutenimo de criticar a tan compleja institucioacuten res-ponsable de gran parte de los aconteceres en el Nuevo Mundo vale la pena analizar algunas singularidades Muchos de sus miembros fueron grandes ejemplos de valor e inteligencia a la hora de tratar los maacutes variados y escabrosos asuntos con los que se encontraron los cristianos en la otra orilla durante este periacuteodo Se debe resaltar tam-

157ESPANtildeOLAS DE ULTRAMAR EN LA HISTORIA Y EN LA LITERATURA

bieacuten su caraacutecter medieval en la manera de hacer apostolado y de entender y tratar a los potenciales cristianos Si se tienen en cuenta los privilegios y prerrogativas que algunas de las altas jerarquiacuteas eclesiaacutesticas tuvieron no seriacutea superfluo estimar que un respeta-ble porcentaje de la poblacioacuten de origen laquodudosoraquo muy bien podiacutea venir de la misma iglesia Fueron muchas las viacutectimas y muchas las familias divididas por un padre laquoinvi-sibleraquo Gran parte de los hijos o laquosobrinosraquo de estos sacerdotes pasaron a ocupar cargos similares incluyendo los privilegios que estos cargos llevaban consigo como si se trata-se de cualquier otro oficio gremial transmitido generacionalmente regla tan comuacuten en la Europa medieval Todaviacutea a finales del siglo XIII en Espantildea los derechos de los hijos y nietos de los sacerdotes estaban protegidos por la ley sin que hubiesen podido ser erradicados por las reformas gregorianas (Ratcliffe 347)139

Las letras espantildeolas ya se haciacutean eco de estos lances amorosos entre representantes de la Iglesia y ciertas damas del lugar desde los tiempos del poeta riojano Gonzalo de Berceo En su obra maacutes conocida Los milagros de Nuestra Sentildeora Berceo describe con un realismo ingenuo y sencillo relatos de humor y de humanismo sobre aquellos hombres de carne y hueso que eran perdonados por la intercesioacuten de la Virgen Mariacutea Juan Ruiz por su lado haraacute de su Libro de buen amor la obra maacutes representativa en este sentido Seriacutea prolijo recordar la actuacioacuten de la Iglesia durante diversos periacuteodos de la Edad Media no soacutelo en Espantildea sino en toda Europa En la Espantildea musulmana del siglo XII concretamente en Sevilla el comportamiento de los representantes de la iglesia cristia-na (mozaacuterabe) en territorio islaacutemico es duramente criticado por el sevillano Ibn Abdun Este precioso documento muestra el estricto control y falta de confianza que existiacutea sobre la mujer prohibieacutendolas que entrasen en las laquoabominablesraquo iglesias cristianas

porque los cleacuterigos [cristianos] son libertinos fornicadores y sodomi-tas Asimismo debe prohibirse a las mujeres francas que entren en la iglesia maacutes que en diacuteas de funcioacuten o fiesta porque alliacute comen beben y fornican con los cleacuterigos y no hay uno de ellos que no tenga dos o maacutes de estas mujeres con que acostarse Han tomado esta costumbre por haber declarado iliacutecito lo liacutecito y viceversa Convendriacutea pues mandar a los cleacuterigos que se casasen como ocurre en Oriente y que si quie-ren lo hagan (Leacutevi-Provenccedilal 150)

Pese a existir una convivencia paciacutefica durante gran parte de la Edad Media entre los tres credos monoteiacutestas de Espantildea (cristianos musulmanes y judiacuteos) esto no suponiacutea que no existiese desprecio y desconfianza entre estos grupos religiosos Dice Abdun resaltando el peligro que suponiacutea que una mujer entrase en casa de un cleacuterigo cristiano de vida ceacutelibe

No debe tolerarse que haya mujer sea vieja o no en casa de un cleacuterigo mientras eacuteste rehuacutese casarse Obliacutegueseles ademaacutes a circuncidarse co-mo les obligoacute al-Mutadid pues si a lo que dicen siguen el ejemplo de Jesuacutes (iexclDios les bendiga y salve) Jesuacutes se circuncidoacute y precisamente ellos que han abandonado esta praacutectica tienen una fiesta que celebran solemnemente el diacutea de su circuncisioacuten (Leacutevi-Provenccedilal 150-151)

139 Valdriacutea la pena ver si han cambiado mucho las cosas desde hace quinientos antildeos a esta parte o si in-cluso la iglesia moderna ha retrocedido en tolerancia en cuanto a las relaciones sexuales de los representantes de la Iglesia

158 JUAN FRANCISCO MAURA

El historiador argentino Germaacuten Arciniegas recoge un pasaje ilustrativo de lo men-cionado anteriormente pero trasladado al ambiente de la colonia diciendo que incluso en poblaciones pequentildeas como Santa Fe con poco maacutes de un convento y una ermita la fragilidad de la carne enredaba a frailes soldados y virreyes por igual laquoEl buen So-liacutes que murioacute en olor de santidad con la cabeza reclinada sobre un par de ladrillos y en saya de franciscano cruzaba en las noches el solar de su palacio para ir a besar a la Marichuelaraquo (118-19)

Arciniegas recoge tambieacuten un suceso aparecido en el diario de Lima en 1667 que no tuvo que ser extraordinario durante los primeros antildeos de la colonia laquoEl fraile carmelita mdashGrande hereje y siendo sacerdote deciacutea misa gran perro lujurioso deshonesto que relatando sus maldades dijo que en cierta ciudad habiacutea conocido carnalmente a maacutes de trescientas y sesenta mujeres y en un convento de monjas habiacutea cometido muchos sacrilegios Este lo trujeron preso de Buenos Aires por Chileraquo (119)

Las controversias de la iglesia moderna sobre las relaciones que los eclesiaacutesticos de-ben tener con el sexo femenino parece que no han encontrado todaviacutea respuesta Sigue existiendo miedo y recelo a que la mujer comparta no soacutelo poder en la jerarquiacutea de la iglesiacutea sino en la vida privada de los miembros de la institucioacuten En la Nueva Espantildea el primer obispo de Meacutexico Juan de Zumaacuterraga viendo en la mujer un ser de tentacioacuten irresistible prohibioacute terminantemente la presencia de eacutestas en su casa Ni siquiera para su limpieza y aseo El franciscano Juan de Torquemada se refiere a este comportamien-to como una de las virtudes del popular obispo

Fue este benditiacutesimo prelado muy amigo de la virtud y de virtuosos y aceacuterrimo reprehendedor de vicios y viciosos y tan enemigo de la ociosidad que no permitiriacutea que alguno de su casa estuviese ocioso fue amiciacutesimo de la limpieza por lo cual jamaacutes consintioacute que mujer alguna entrase en su casa aunque fuese necesaria al servicio de ella ni nunca consintioacute que por alguna ocasioacuten subiese mujer a lo alto y aposentos de ella antes lo teniacutea todo cerrado como un monasterio porque sabiacutea (como quien tambieacuten sabiacutea) que la ocasioacuten suele derribar los maacutes fuertes y robustos corazones (450 lib 20 cap 31)

No fueron uacutenicamente miembros de la iglesia catoacutelica los que valoraron la lucha con-tra la tentacioacuten siguiendo al pie de la letra el crudeliacutesimo refraacuten laquoentre santa y santo pared de cal y cantoraquo Se tienen algunas noticias de la vida social de los primeros tiem-pos de la colonia En estos documentos se puede observar coacutemo no distaban mucho las oacuterdenes que se dictaban en la metroacutepoli y las que se llevaban a cabo en la Nueva Espantildea La vida social tanto de damas como de algunos miembros de la iglesia de las colonias era maacutes laquorelajadaraquo de lo que las normas permitiacutean Gracias a la informacioacuten ofrecida por Manuel Romero de Terreros disponemos de los nombres de las primeras virreinas

Las esposas de los primeros cinco Virreyes Don Antonio de Mendoza Don Luis de Velasco Don Gastoacuten de Peralta Don Martiacuten Enriacutequez de Almanza y Don Lorenzo Suaacuterez de Mendoza Conde de la Coruntildea fueron respectivamente Dontildea Caterina de Vargas Dontildea Ana de Cas-tilla y Mendoza hija de Don Diego de Castilla Sentildeor de Gor y Caba-

159ESPANtildeOLAS DE ULTRAMAR EN LA HISTORIA Y EN LA LITERATURA

llerizo de Carlos V Dontildea Leonor de Vieo Dontildea Mariacutea Manrique hija del Marqueacutes de Aguilar y Dontildea Catalina de la Cerda hija del segundo Duque de Medinaceli (Romero 2)

Existen noticias concretas de la seacuteptima virreina de la Nueva Espantildea (1586) dontildea Blanca de Velasco marquesa de Villamanrique En ellas destaca lo anteriormente men-cionado sobre la falta de tolerancia existente en aquellos tiempos difiacutecilmente com-prensible si no fuera por fragmentos esporaacutedicos conservados sobre la vida colonial en la Nueva Espantildea En la siguiente Relacioacuten hecha por autores anoacutenimos sobre la visita que hizo Fray Alonso Ponce Comisario General de la Orden Seraacutefica a las provincias de la Nueva Espantildea se mencionan las eneacutergicas medidas que con los miembros de su orden en su opinioacuten de moral laquomuy relajadaraquo tomoacute este religioso Tambieacuten aparecen mencionadas sus relaciones con la Virreina

Captoacutese ademaacutes la enemistad del gobernante y de la Virreina Dontildea Blanca de Velasco hija del cuarto Conde de Nieva sentildeora seguacuten pare-ce de conducta ligera y caraacutecter maacutes que dominante laquoPor este mismo tiempo (septiembre de 1586) fueron el Virey y la Vireyna a holgarse y recrearse en la cibdad de Xochimilco Posoacute con toda su casa dentro de nuestro convento en un dormitorio deacutel y detuacutevose alliacute siete u ocho diacuteas en que los indios les hicieron grandes fiestas aunque les costaron caras porque en una dellas murieron dos o tres dellos con un tiro que se disparoacute y reventoacute y al principal indio de aquella cibdad hirieron muy malraquo (Romero 3-4)

A pesar del riacutegido control eclesiaacutestico y civil que habiacutea en la Nueva Espantildea existieron tambieacuten pareacutentesis en los que incluso miembros de la iglesia y mujeres mdashhumanos al fin y al cabomdash pudieron disfrutar de algunos momentos de regocijo y alegriacutea Con-tinuando con la cita anterior el mismo autor se queja del laquoexcesoraquo de libertad en los frailes que se suponiacutea que teniacutean que profesar una extremada pobreza y no digamos castidad En primer lugar se describen pormenorizadamente la abundancia en el tipo y cantidad de comida de toda clase dulces y vino que se consumieron con largueza y generosidad durante aquellas fiestas Pero lo que maacutes indigna al autor (o autores) fue que llegasen a entrar mujeres en el convento

y aunque todo esto es malo delante de Dios y delante de los hom-bres lo que maacutes mal parecioacute y de que todo el mundo tuvo que mur-murar fueacute la demasiada libertad rotura y disolucioacuten que hubo en en-trar y estar muy de propoacutesito mujeres no soacutelo la Vireyna y las suyas sino otras muchas dentro del dicho convento y andar por las celdas como si fuese cosa profana y como si no hubiera breve apostoacutelico que soacute graves penas y censuras prohibe estas entradas y como si a los frai-les no los comprendiera el dicho breve por admitirlas y no estuviera asiacute declarado y mandado por nuestros estatutos generales de Toledo (Romero 4-5)

La preocupacioacuten por las laquotentaciones de la carneraquo fuera del matrimonio siempre es-tuvo en la mente de los religiosos espantildeoles asiacute como de otras nacionalidades y reli-

160 JUAN FRANCISCO MAURA

giones que intentaban vanamente erradicar algo tan intriacutenseco al ser humano como a cualquier otra especie animal Esta preocupacioacuten se acentuoacute mucho maacutes en el Nuevo Mundo donde muchas sociedades tribales no veiacutean a la mujer como parte integrante de su propiedad privada La razoacuten es obviamente socioloacutegica y ha existido desde el principio de los tiempos en las civilizaciones maacutes primitivas laquoNo desearaacutes a la mujer del proacutejimoraquo El quebrantar este precepto equivaldriacutea a desestabilizar desde su base a la sociedad judeo-cristiana fundamentada en la familia Las penas aplicadas en estas transgresiones seraacuten lo suficientemente severas como para marginar socialmente mdashen el mejor de los casosmdash a aquellos que las pongan en praacutectica Siendo la mujer la encar-gada por la naturaleza de trasmitir la descendencia de la especie su libertad sexual se veraacute limitada por el peligro de quedar embarazada cada vez que ignore tal elemental precepto140

Primeras escritoras del Nuevo Mundo

Contra cuerdos y contra locos estaacute obligado cualquier caballero andante a volver por la honra de las mujeres cualesquiera que sean Cuanto maacutes por las reinas de tan alta guisa y pro como fue la reina Madaacutesima a quien yo tengo particular aficioacuten por sus buenas partes porque fuera de haber sido fermosa ademaacutes fue muy prudente y muy sufrida en sus calamidades que las tuvo muchas (Cervantes Don Quijote)

Fueron varias las escritoras que durante los siglos XVI y XVII tuvieron una relacioacuten di-recta o indirecta con el Nuevo Mundo Muchas de ellas eligieron la vida monaacutestica mdashen algunos casos como refugio huyendo de sus maridosmdash uacutenica salida en una estructura social en donde no eran muchas las opciones especialmente en una eacutepoca donde el fac-tor religioso pesaba casi tanto como el econoacutemico pero sobre todo para dedicarse a una vida espiritual difiacutecilmente alcanzable en otras circunstancias Mariloacute Vigil apunta que las monjas que lo eran por su propia voluntad ademaacutes de tener inquietudes religiosas tambieacuten las teniacutean intelectuales como es el caso de la escritora miacutestica espantildeola Santa Teresa de Jesuacutes (1515-1582) que ademaacutes de tener una de las vidas maacutes interesantes que se conozcan supo sacar tiempo para escribir las maacutes bellas manifestaciones de la poesiacutea liacuterica y sobre todo de la prosa castellana (Vigil 237-38) Cada una de estas mujeres de-dicadas a la vida literaria y espiritual de su tiempo se merece muchiacutesimo maacutes espacio del que se les pueda ofrecer en estas pocas liacuteneas No obstante con estas pasajeras men-

140 Aunque afortunadamente las cosas han cambiado para la mujer no se debe dejar de mencionar la can-tidad de abusos sexuales de la que es viacutectima en la sociedad moderna

161ESPANtildeOLAS DE ULTRAMAR EN LA HISTORIA Y EN LA LITERATURA

ciones se espera al menos incluirlas y poder despertar el suficiente intereacutes para que sus vidas y sus obras no sigan sumergidas en las simas del olvido Para que estas mujeres de la iglesia pudiesen satisfacer su curiosidad cognoscitiva era necesario romper todas aquellas barreras que supusiesen un estorbo o una restriccioacuten a la hora de investigar consultar o hablar con cualquier persona religiosa de cualquier orden o secular ya fue-se obispo o cleacuterigo Las posiciones intelectuales entre las diferentes oacuterdenes religiosas fueron muy dispares como bien es sabido No eran iguales los planteamientos teoloacute-gicos de los dominicos que los de los franciscanos o los de los carmelitas que los de los agustinos o jesuitas Era necesario por lo tanto tener acceso a estas fuentes de informa-cioacuten para poder constrastar las diferencias y hacer valoraciones propias (Vigil 237-38) El escritor espantildeol Caro Baroja destaca el caraacutecter enciclopeacutedico del catolicismo donde se han integrado corrientes y posturas muy dispares que a traveacutes del diaacutelogo daban cierto espacio al creyente con maacutes curiosidad intelectual para que este pudiese compa-rar y valorar las diferentes opciones que se le ofreciacutean (Vigil 237-38)

Varias de estas mujeres intelectuales fueron hijas de conquistadores que aunque na-cidas en suelo americano seguiacutean expresaacutendose en la lengua de sus padres con no me-nos fuerza que sus contemporaacuteneas peninsulares Es cierto que existieron numerosas escritoras en el Nuevo Mundo durante el siglo XVIII algunas dedicadas incluso al estudio de las matemaacuteticas como la mexicana Dontildea Francisca Gonzaga y Castillo Pero para limitar el presente trabajo a los siglos XVI y XVII uacutenicamente se incluiraacuten ejemplos de estos dos siglos

La peruana Josefa de Alarcoacuten publicoacute en 1648 unas liras dedicadas a las Exequias del Priacutencipe Baltasar Carlos

Cifro en capilla breveEl tribunal de la Magestad maacutes graveEn fe de lo que debeA Carlos que en dos mundos no cabe141

El caso de Sor Jeroacutenima de la Asuncioacuten es muy interesante una mujer que tuvo la oportunidad de viajar a Meacutexico y posteriormente a las Filipinas para cumplir con las mi-siones que le habiacutean sido encomendadas por su orden Nacida en Toledo en 1555 en el seno de una noble y acaudalada familia estuvo destinada a recorrer el mundo ofrecien-do sus servicios a todos los necesitados distinguieacutendose por su ardiente caridad laquovien-do que los galeotes eran tratados con dureza excesiva sobre todo cuando los llevaban de un pueblo a otro procuroacute aliviar las penas de aquellos desgraciados y lo consiguioacute en parteraquo (Serrano y Sanz 268 65) Hija del licenciado e ilustre jurista Pedro Garciacutea Yaacute-ntildeez y de dontildea Catalina de la Fuente ingresoacute contra su voluntad en el monasterio de las Clarisas de Santa Isabel de los Reyes (Toledo) el 5 de agosto de 1570 (Trevintildeo 46) hay que decir que eacutesta no seraacute la uacutenica voluntad contra la que tuvo que luchar

Sor Jeroacutenima se embarcoacute para Meacutexico y de alliacute partioacute hacia Manila junto con siete compantildeeras en el famoso laquoGaleoacuten de Manilaraquo que saliacutea anualmente del puerto mexi-cano de Acapulco Su viaje a las Filipinas duroacute un antildeo y tres meses desde su salida de Espantildea tiempo en el que demostroacute un gran valor y determinacioacuten por el soacutelo hecho de

141 Manuel Serrano y Sanz Apuntes para una biblioteca de escritoras espantildeolas desde el antildeo 1401 al 1833 vols 268 269 270 271 Biblioteca de Autores Espantildeoles (Madrid Atlas 1975) 268 19

162 JUAN FRANCISCO MAURA

embarcarse en tan precarias naves Fue la primera misionera de Oceaniacutea muriendo en Manila en 1621 Alliacute fundoacute el monasterio de Santa Clara que perviviriacutea hasta ser bom-bardeado en la Segunda Guerra Mundial (Trevintildeo 47) Escribioacute su Vida donde trata de la fundacioacuten del convento y de todas las tribulaciones mdashllegoacute a ser excomulgadamdash y satisfacciones que una vida dedicada a una causa justa proporciona Tambieacuten escribioacute una obra de caraacutecter filosoacutefico-teoloacutegico titulada Carta de marear en el mar del mundo nombre alegoacuterico que da cuenta de la enorme distancia recorrida a traveacutes del laquomar del espiacuterituraquo por sor Jeroacutenima He aquiacute algunos de sus versos de caraacutecter religioso

Vuestra soy para vos naciacuteiquestQueacute mandaacuteis hacer de miacute Inaccesible grandezaEterna Sabiduriacuteay bondad del alma miacuteaDios un ser poder y Altezamirad la suma pobrezade eacutesta que se ofrece aquiacuteiquestQueacute mandaacuteis hacer de miacute (Serrano y Sanz 268 66)

Ya en Meacutexico tenemos otro ejemplo de una mujer dedicada por completo a Dios y al estudio y composicioacuten de obras de caraacutecter teoloacutegico Dontildea Ana Mariacutea del Costa-do de Cristo nacida en la ciudad de Tlaxcala hacia el antildeo 1650 Tomoacute la orden de San Francisco para consagrarse a las labores de su orden y a la escritura Se dice que con los escritos de Dontildea Ana Mariacutea se podriacutean formar veinte tomos (Serrano y Sanz 268 282) Estas son algunas de sus obras Vida y muerte de Jesucristo Nuestro Sentildeor Vida del Seraacutefico Padre San Francisco de Asiacutes Vida de la iacutenclita Virgen Santa Clara Vida del sutiliacutesimo doctor Juan Duns Escoto

Pero no todas las monjas tuvieron vidas tan dedicadas al estudio y la oracioacuten Loacutegica-mente entre un nuacutemero tan grande de mujeres existioacute de todo y seriacutea un error pensar que todos los conventos femeninos estaban integrados por laquocaacutendidas palomasraquo Una monja en el siglo XVI y XVII teniacutea mucha maacutes fuerza que una mujer ordinaria ya que actuaban en grupo y la entrada a los recintos donde viviacutean estaba permitida solo a mu-jeres Esta situacioacuten las haciacutea mucho maacutes fuertes a todos los niveles que una mujer sola protegida uacutenicamente por su familia laquoLas monjas durante los siglos XVI y XVII lucharon por eludir la clausura y por zafarse del control que los frailes de las secciones masculi-nas de sus congregaciones ejerciacutean sobre ellasraquo (Vigil 230) Soacutelo un antildeo maacutes tarde que dontildea Ana Mariacutea del Costado de Cristo en 1651 y a 12 leguas de Meacutexico nacioacute la sin par Sor Juana Ineacutes de la Cruz hija de don Pedro Manuel de Asbaje natural de Vergara (Vizcaya) y de Dontildea Isabel Ramiacuterez de Santillana hija de espantildeoles (Serrano y Sanz 268 289) Por ser sin lugar a dudas la poeta maacutes importante de su tiempo y probable-mente la maacutes conocida del mundo hispano no profundizaremos en ella Su obra es un canto a la inteligencia y el exponente maacutes destacado de la literatura barroca americana tanto en prosa como en verso Destacareacute simplemente que Sor Juana Ineacutes pese a vivir en un sociedad donde no eran excesivas las libertades concedidas a las mujeres tuvo el caraacutecter y la determinacioacuten de dejarnos las maacutes bellas poesiacuteas amorosas que si bien estuvieron enmarcadas en un ambiente religioso como era de esperar por su condicioacuten

163ESPANtildeOLAS DE ULTRAMAR EN LA HISTORIA Y EN LA LITERATURA

pudieron transcender como unas de las maacutes bellas manifestaciones literarias que hoy en diacutea se conservan Fue su agudeza mental sensibilidad y cultura tal que no fueron suficientes los soacutelidos muros del convento para contener el genio de tan extraordinaria mujer Recordemos sus conocidiacutesimos versos en defensa de las mujeres

Hombres necios que acusaacuteisa la mujer sin razoacutensin ver que sois la ocasioacutende lo mismo que culpaacuteis142

Las metaacuteforas y la delicadeza que emplea en rebatir a su obispo en su laquoRespuesta a sor Filotea de la Cruzraquo no son solamente el epiacutetome del feminismo de su tiempo sino una de las maacutes brillantes manifestaciones del barroco hispano Poesiacutea teatro ensayo y un conocimiento extraordinario de las ciencias claacutesicas de su tiempo hacen de esta mujer un ejemplo extraordinario de las letras universales Ya son cientos los artiacuteculos y libros que se han escrito sobre Sor Juana y no dejan de aparecer tesis doctorales sobre los maacutes diversos temas conectados con la citada autora143 Como nos dice Stephanie Merrim en su documentada obra Early Modern Womenrsquos Writing and Sor Juana Ineacutes de la Cruz

She wrote and published on secular themes as atypical for a nun as human love Her remarkably extensive writings essayed and reenacted most of the (male) poetic dramatic theological and even philosophi-cal discourses of her times in the metropolis making her works a com-pendium of baroque culture in its diversity and syncretism Sor Juana self-creation as a learned women effectively toppled many of the walls in which she was materially enclosed and positioned her within the dynamic world of early modern European culture (xii)

No se debe dejar de mencionar a otras escritoras novohispanas de la eacutepoca que aun-que no fueron tan proliacuteficas y relevantes como Juana Ineacutes de la Cruz dejaron testimo-nio de algunos acontecimientos que tienen intereacutes socioloacutegico o testimonial Este es el caso de Dontildea Mariacutea Estrada Medinilla de igual nombre y apellido que la mujer que acompantildeoacute a las tropas de Corteacutes en su primera entrada a Meacutexico Natural de Meacutexico publicoacute toda su obra a mediados del siglo XVII concentraacutendose principalmente en la lle-gada del Marqueacutes de Villena virrey y capitaacuten general de la Nueva Espantildea a la ciudad de Meacutexico en el antildeo 1640 Escrita en octavas reales la obra trata de las fiestas de toros y cantildeas con que se obsequioacute al citado virrey Fue impresa en Meacutexico en 1641 (Serrano y Sanz 269 402)

Mucho maacutes importante para el presente libro es Dontildea Isabel de Guevara que escribioacute en 1556 la carta en que se expone la ayuda que ofrecieron las mujeres en el descubri-miento y conquista del Riacuteo de la Plata No cabe la menor duda de que esta carta es uno

142 Para una mejor comprensioacuten del caraacutecter de esta excepcional mujer veacutease entre los numeros trabajos publicados Fredo Arias de la Canal Intento de psicoanaacutelisis de Juana Ineacutes y otros ensayos sorjuanistas (Meacutexico Frente de Afirmacioacuten Hispanista 1972) 47

143 Veacuteanse entre otros trabajos Octavio Paz Sor Juana Ineacutes de la Cruz o las trampas de la fe Georgina Sabat de Rivers En busca de Sor Juana Margo Glantz Sor Juana la comparacioacuten y la hipeacuterbole Gerard C Flynn Sor Juana Ineacutes de la Cruz Stephanie Merrim Feminist perspectives on Sor Juana Ineacutes de la Cruz Pamela Kirk Sor Juana Ineacutes de la Cruz religion art and feminism

164 JUAN FRANCISCO MAURA

de los documentos maacutes importantes con que contamos en relacioacuten a la aportacioacuten fe-menina en el proceso de la conquista de Ameacuterica Su importancia viene dada por varios factores Primero es uno de los primeros testimonios mdashsi no el primeromdash en donde se expone abiertamente la indispensable colaboracioacuten de las mujeres en el descubrimien-to y conquista de tierras en el Nuevo Mundo laquoQue si no fuera por ellas todos fueran acabadosraquo En segundo lugar la informacioacuten vertida en estas liacuteneas presenta en parte la manera de pensar de una mujer espantildeola en tales circunstancias Extraordinario tes-timonio de primera mano que nos da una idea de lo que significoacute en muchos casos el valor y entrega constantes de muchas de estas mujeres que auacuten a riesgo de perder sus vidas no dudaron en luchar al lado de los hombres por una causa que consideraban laquocomuacutenraquo

La relevancia histoacuterica de dicha carta hace que merezca ser transcrita en su totali-dad

Carta de dontildea Isabel de Guevara a la princesa gobernadora dontildea Juana exponiendo los trabajos hechos en el descubrimiento y conquista del Riacuteo de la Plata por las mujeres para ayudar a los hombres y pidiendo repartimiento

para su marido Asuncioacuten 2 de julio de 1556

Muy alta y muy poderosa sentildeora

A esta provincia del Riacuteo de la Plata con el primer gobernador de ella don Pedro de Mendoza hemos venido ciertas mujeres entre las cuales ha querido mi ventura que fuese yo la una y como la armada llegase al puerto de Buenos Aires con mil quinientos hombres y les faltase el bastimento fue tamantildea el hambre que a cabo de tres meses murie-ran los mil esta hambre fue tamantildea que ni la de Jerusalem se le puede igualar ni con otra ninguna se puede comparar Vinieron los hombres en tanta flaqueza que todos los trabajos cargaban de las pobres mu-jeres asiacute en lavarles las ropas como en curarles hacerles de comer lo poco que teniacutean limpiarlos hacer centinela rondar los fuegos armar las ballestas cuando algunas veces los indios les veniacutean a dar guerra hasta cometer a poner fuego en los versos y a levantar los soldados los que estaban para ello dar arma por el campo a voces sargentean-do y poniendo en orden los soldados porque en este tiempo como las mujeres nos sustentamos con poca comida no habiacuteamos caiacutedo en tanta flaqueza como los hombres Bien creeraacute V A que fue tanta la so-licitud que tuvieron que si no fuera por ellas todos fueran acabados y si no fuera por la honra de los hombres muchas maacutes cosas escribiera con verdad y los diera a ellos por testigos Esta relacioacuten bien creo que la escribiraacuten a V A maacutes largamente y por eso cesareacute Pasada esta tan peligrosa turbunada determinaron subir el riacuteo arriba asiacute flacos como estaban y en entrada de invierno en dos bergantines los pocos que quedaron vivos y las fatigadas mujeres los curaban y los miraban y les guisaban la comida trayendo la lentildea a cuestas fuera del naviacuteo y animaacutendolos con palabras varoniles que no se dejasen morir que presto dariacutean en tierra de comida metieacutendolos a cuestas en los

165ESPANtildeOLAS DE ULTRAMAR EN LA HISTORIA Y EN LA LITERATURA

bergantines con tanto amor como si fueran sus propios hijos Y como llegamos a una generacioacuten de indios que se llaman tinbues sentildeores de mucho pescado de nuevo los serviacuteamos en buscarles diversos modos de guisados porque no les diese en rostro el pescado a causa de que lo comiacutean sin pan y estaban muy flacos Despueacutes determinaron subir el Paranaacute arriba en demanda de bastimento en el cual viaje pasaron tanto trabajo las desdichadas mujeres milagrosamente quiso Dios que viviesen por ver que en ellas estaba la vida de ellos porque todos los servicios del naviacuteo los tomaban ellas tan a pechos que se teniacutea por afrentada la que menos haciacutea que otra sirviendo de marear la vela y gobernar el naviacuteo y sondar de proa y tomar el remo al soldado que no podiacutea bogar y escotar144 el naviacuteo y poniendo por delante a los soldados que no se desanimasen que para los hombres eran los trabajos verdad es que a estas cosas ellas no eran apremiadas ni las haciacutean de obliga-cioacuten ni las obligaba si solamente la caridad Asiacute llegaron a esta ciudad de la Asuncioacuten que aunque ahora estaacute muy feacutertil de bastimentos en-tonces estaba de ellos muy necesitada que fue necesario que las muje-res volviesen de nuevo a sus trabajos haciendo rosas con sus propias manos rosando y carpiendo y sembrando y recogiendo el bastimento sin ayuda de nadie hasta tanto que los soldados guarecieron de sus fla-quezas y comenzaron a sentildeorear la tierra y adquirir indios e indias de su servicio hasta ponerse en el estado en que ahora estaacute la tierra He querido escribir y traer a la memoria de V A para hacerle saber la ingratitud que conmigo se ha usado en esta tierra porque al presente se repartioacute por la mayor parte de los que hay en ella asiacute de los anti-guos como de los modernos sin que de miacute y de mis trabajos se tuviese ninguna memoria y me dejaron de fuera sin me dar indio ni ninguacuten geacutenero de servicio Mucho me quisiera hallar libre para me ir a presen-tar delante de VA con los servicios que a SM he hecho y los agravios que ahora se me hacen mas no estaacute en mi mano porque estoy casada con un caballero de Sevilla que se llama Pedro de Esquivel que por servir a SM ha sido causa que mis trabajos quedasen tan olvidados y se me renovasen de nuevo porque tres veces le saqueacute el cuchillo de la garganta como allaacute VA sabraacute A que suplico mande me sea dado mi repartimiento perpetuo y en gratificacioacuten de mis servicios [en el origi-nal del AHN Diversos doc 141 dice ademaacutes mande que sea proveydo mi marido de alguacuten cargo conforme a la calidad de su persona pues el de su parte por sus servicios lo merece] lo merece Nuestro sentildeor acre-ciente su Real vida y estado por muy largos antildeos De esta ciudad de la Asuncioacuten y de julio 2 1556 antildeosServidora de V A que sus Reales manos besa

Dontildea Isabel Guevara

144 Sacar agua de un riacuteo acequia o presa

166 JUAN FRANCISCO MAURA

Sobremdash A la muy alta y muy poderosa sentildeora Princesa dontildea Joana Gobernadora de los reinos de Espantildea etc ndash En su Consejo de Indias (Isabel de Guevara 619-21)

Iroacutenicamente la carta teniacutea que llegar a manos de la desdichada heredera del trono de Castilla e hija de los Reyes Catoacutelicos Juana laquola Locaraquo que habiacutea muerto el antildeo an-terior Son profeacuteticas las palabras de esta mujer no soacutelo porque sus hechos personales quedasen en el olvido sino porque incluso se ha borrado la historia de las mujeres en el Nuevo Mundo negando su presencia Por lo menos Isabel Guevara tuvo acceso a una pluma iquestCuaacutentas seriacutean las que ni siquiera sabriacutean escribir

Otra contemporaacutenea fue dontildea Leonor de Iciz que vivioacute durante la segunda mitad del siglo XVI Interesa sobre todo por los sonetos que escribioacute en elogio de Ercilla soldado que participoacute en la conquista de Chile y que se inmortalizoacute con su obra La Araucana (Serrano y Sanz 269 534) Lo mismo hizo Dontildea Bernarda Lintildeaacuten en 1610 autora de otro soneto en memoria del capitaacuten Gaspar Peacuterez de Villagraacute que participoacute en la conquista de Nuevo Meacutexico (Serrano y Sanz 270 14) Los escritos de estas mujeres tratan de de dos de las eacutepicas maacutes dramaacuteticas de la conquista

En el Peruacute y en pleno siglo XVII aparece otra fundadora de conventos Sor Bernardina de Jesuacutes que ademaacutes fue comparada con Santa Teresa por la semejanza de sus laquocartasraquo con las de la santa de Avila Fue fundadora del convento de Tacunga en Quito maacutes tarde destruiacutedo por un terremoto Dice Serrano y Sanz con respecto a su biografiacutea un tanto legendaria que fue carmelita descalza de Lima y hermana de Dontildea Mariacutea Benavides y Esquivel abuela de D Pedro de Peralta Barnuevo (Serrano y Sanz 269 553) Dicen que esta santa se alimentoacute durante treinta antildeos con laquochochos y caacutescaras de naranja hecho tan raro como increiacuteble Cuando fallecioacute reparaban las monjas en ponerle una vara de azucenas porque habiacutea sido casada y aquellas flores aparecieron milagrosamente sobre el cadaacuteverraquo (Serrano y Sanz 269 553)

Otra limentildea del primer cuarto del siglo XVII con reputacioacuten de santa fue Dontildea Luisa Melgarejo En este caso no se trata de una religiosa de oficio sino de la mujer del doctor Juan de Soto La uacutenica diferencia es que dontildea Luisa al parecer teniacutea laquovisiones y reve-lacionesraquo lo que debioacute poner nervioso a maacutes de un miembro del tribunal del laquoSanto Oficioraquo que consideraron sus escritos laquoculpadosraquo De su papel de laquosantaraquo pasa por lo tanto al de laquoposesaraquo o laquoendemoniadaraquo El inquisidor de Lima Gaitaacuten escribioacute un infor-me donde a traveacutes de la opinioacuten puacuteblica y de otras averiguaciones se deciacutea que dontildea Luisa Melgarejo laquomujer santaraquo sabiacutea cuando las almas de los difuntos saliacutean del Purga-torio El diacutea 14 de noviembre de 1623 se decidioacute tomar posesioacuten de todos los cuadernos en los que habiacutea escrito las experiencias de todos sus laquoarrobos suspensiones extasis y revelacionesraquo Estos cuadernos una vez recogidos presentaron toda una serie de al-teraciones borrones adiciones enmiendas incluso diferente letra por lo que despueacutes de haber sido examinados resultaron culpables145 Excelente imaginacioacuten debioacute tener dontildea Luisa Melgarejo la suficiente al parecer para convencer a algunos miembros de la iglesia de que en sus escritos laquohabiacutea algoraquo que mereciacutea la pena Estas cosas ocurriacutean en Lima uno de los centros culturales maacutes importantes de la vida social y poliacutetica en la Ameacuterica espantildeola Lima a comienzos del siglo XVII seguacuten el empadronamiento llevado

145 Serrano y Sanz 270 47 Veacutease J T Medina Historia del tribunal del Santo Oficio de la Inquisicioacuten de Lima (1569-1820) (Santiago Imprenta Gutemberg 1887) Tomo II 34-41

167ESPANtildeOLAS DE ULTRAMAR EN LA HISTORIA Y EN LA LITERATURA

a cabo en 1614 por el marqueacutes de Montesclaros era una ciudad de 25000 habitantes de los que 11000 eran espantildeoles El nuacutemero de religiosos y religiosas llegaba a 1720 (Pittaluga 77)

Se sabe que en la Isla de Santo Domingo durante el siglo XVI nacioacute o al menos resi-dioacute una poeta de ceacutelebre apellido en los aconteceres del Nuevo Mundo Dontildea Elvira de Mendoza de la que se conserva un manuscrito en la Real Academia de la Historia laquoCantares miacuteos que estaacuteis rebeladosraquo Eugenio de Salazar hace un elogio de ella como poeta en un Soneto a la ilustre Poeta y Sentildeora Dontildea Elvira de Mendoza moradora en la ciudad de Santo Domingo (Serrano y Sanz 270 53)

Nacida en Burgos sobre el antildeo 1590 dontildea Luisa de Padilla merece un lugar aparte dentro del grupo de mujeres escritoras de su eacutepoca Por su estilo faacutecil y castizo su no-vedad de pensamientos y su rica erudicioacuten recibioacute el siguiente comentario de Manuel Serrano y Sanz laquoPocas figuras hay en nuestra historia literaria femenil que puedan compararse a esta eminente prosista acaso la maacutes notable de cuantas florecieron en Es-pantildea durante el siglo XVIIraquo (Serrano y Sanz 270 95-96) Este comentario y comparacioacuten deberiacutea ampliarse para que tambieacuten incluyese a laquola historia literaria varonilraquo

Dontildea Luisa fue defensora de la labor que la Inquisicioacuten estaba realizando en la laquolim-piezaraquo de mujeres laquosoldados del demonioraquo que existieron en algunas provincias espa-ntildeolas en aquel tiempo Muchas de las mujeres que combinaban la magia con los po-deres curativos fueron condenadas no solamente por hombres de la Inquisicioacuten sino tambieacuten por mujeres de todas las clases sociales como es el caso de Luisa de Padilla condesa de Aranda En su obra Elogios de la verdad e invectiva contra la mentira preveniacutea contra aquellos que practicaban artes en contra de la religioacuten cristiana La magiacutea negra seguacuten Padilla era la causante de que muriesen casi tantas personas como otras causas naturales habieacutendose descubierto hasta seis mil brujas en Vizcaya y Guipuzcua con-fesando una mujer de un pueblo pequentildeo haber matado con su laquomagiaraquo a ochocientas personas (Perry 31) Eran estos laquomales de ojoraquo y maldiciones seguacuten la autora las causas de que se secasen los pechos de las madres lactantes que se separasen las parejas casa-das y que abortasen las embarazadas (Perry 31)

Si se tiene en cuenta que dontildea Luisa estuvo emparentada con la maacutes rancia aristocra-cia de su tiempo o lo que es lo mismo con algunos de aquellos que en cierta manera dirigiacutean los destinos de Espantildea en aquella eacutepoca (Duques de Lerma Duque de Uceda Marqueacutes de Cueacutellar Conde de Santa Gadea Marqueacutes de Belmonte por citar algunos) se comprenderaacute mejor su identificacioacuten con una institucioacuten que en teoriacutea velaba por la salvaguarda de los valores laquoeternosraquo de una Espantildea destinada a ser la campeona del ca-tolicismo durante los siglos XVI y XVII El padre de dontildea Luisa fue don Martiacuten de Padilla y Manrique extraordinario militar que proboacute su valor contra enemigos moriscos ingle-ses holandeses piratas berberiscos y el renegado genoveacutes Muley Faxad Fue veterano de la batalla de Lepanto donde apresoacute a cuatro galeras y acompantildeoacute con su escuadra a la reina Dontildea Margarita de Austria cuando vino de Geacutenova en 1598 laquoHabiacutea obtenido a 24 de julio de 1587 el tiacutetulo de Conde de Santa Gadea y en 1596 el de Capitaacuten General de la Armada del mar Oceacuteanoraquo (Serrano y Sanz 27095-96)

Por otra parte tambieacuten se sabe que dontildea Luisa participoacute directamente y desde tem-prana edad en la praacutectica de algunas actividades intelectuales como la historia y la arqueologiacutea a la vez que dedicaba su tiempo a virtudes cristianas como la caridad y el socorro de los necesitados (Serrano y Sanz 270 97) Resulta mucho maacutes faacutecil compren-

168 JUAN FRANCISCO MAURA

der la postura ideoloacutegica de esta gran mujer si tienen en cuenta ademaacutes de los factores antes mencionados otros tantos de caraacutecter biograacutefico concernientes a su educacioacuten y matrimonio

Otra escritora fue la mexicana dontildea Mariacutea Casilda Pozo natural de Temestla (Meacutexi-co) Nacida en el mes de abril de 1682 dejoacute escrita su biografiacutea en 16 cuadernos el ma-nuscrito original se encuentra en la biblioteca del colegio de San Gregorio de Meacutexico Fue su confesor el jesuiacuteta Domingo Quiroga que fue quieacuten la incitoacute a escribir su obra (Serrano y Sanz 270 137) Sor Juana de San Antonio aparece a principios del siglo XVII formando parte de un grupo de religiosas espantildeolas que fueron a Manila por la ruta de Meacutexico Ademaacutes de distinguirse por sus cualidades personales su obra interesa por ofrecer informacioacuten testimonial y costumbrista acerca de la forma de vestir de chinos y japoneses (Serrano y Sanz 270 225)

Otra monja esta vez ecuatoriana fue Gertrudis de San Ildefonso Nacida en 1652 profesoacute su vocacioacuten en el convento de Santa Cruz de Quito dejando escrita su vida por mandato de su confesor el padre Martiacuten de la Cruz el cual hizo una biografiacutea laquoen tres gruesos voluacutemenesraquo Gertrudis de San Ildefonso murioacute en 1709 (Serrano y Sanz 270 300) en olor de santidad

Sor Mariacutea Ana Agueda de San Ignacio nacioacute el 3 de marzo de 1695 en la dioacutecesis de la puebla de los Angeles en un rancho del lugar de Santiago Tecaliacute (Serrano y Sanz 270300) Esta monja mexicana escribioacute varias obras durante su vida conventual a lo largo de la cual desempentildeoacute el cargo de priora por muchos antildeos Entre sus obras todas de caraacutecter piacuteo y de laquoamor divinoraquo escribioacute un curioso y laquocopiosoraquo tratado de la Leche virginal de la Soberana Madre de Dios El padre Fr Juan de Villa Saacutenchez hace el siguiente comentario al respecto laquoen que hablando primero en sentido natural de los beneficios que debemos a Nuestra Sentildeora pasa a tratar en sentido miacutestico y alegoacuterico enten-diendo en la leche la doctrinaraquo (Serrano y Sanz 270301) Mexicana fue tambieacuten Sor Petronila de San Joseacute que ejercioacute como abadesa del Real monasterio de Jesuacutes Mariacutea de la ciudad de Meacutexico Escribioacute Vidas de varias religiosas ejemplares obra que tiene su im-portancia ya que al parecer laquoDe esta obra se sirvioacute D Carlos de Siguumlenza y Goacutengora para escribir su Parayso Occidental (Meacutexico 1684) seguacuten eacutel mismo declara en el proacutelogo diciendo lsquoa quien si hay algo bueno en esta historia se le debe todorsquoraquo (Serrano y Sanz 270 354) Menos conocida fue su compatriota Sor Luisa de Santa Catalina natural de Xacona laquopueblo situado en las inmediaciones de Zamora (Meacutexico)raquo siendo bautizada en 1682 Escribioacute Cartas espirituales a su confesor el P Juan Loacutepez de Aguado (Serrano y Sanz 270 361-62)146

Todos estos escritos la mayoriacutea de ellos ignorados por el gran puacuteblico tienen la im-portancia de darnos una perspectiva diferente En otras palabras ensentildearnos la maacutes refinada sensibilidad de muchas mujeres que permanecieron y en su mayoriacutea siguen permaneciendo a laquooscurasraquo de una eacutepoca tan rica de la literatura espantildeola como fue el Siglo de Oro Este siglo fue tambieacuten en su dimensioacuten literaria y artiacutestica patrimonio de la mujer

146 Para profundizar en muchas de estas escritoras hispano-americanas la consulta de la Biblioteca Hispano-Americana de Beristain de Souza resulta de capital importancia

169ESPANtildeOLAS DE ULTRAMAR EN LA HISTORIA Y EN LA LITERATURA

Sor Nada ardores divinos de una monja adolescente escritos ineacutedi-tos de una recieacuten profesa del siglo XVI147

iexclQueacute encantadores son tus amores hermana miacutea espo-sa iexclQueacute deliciosos son tus amores maacutes que el vino Y el aroma de tus perfumes es mejor que el de los baacutelsamos Miel virgen destilan tus labios esposa miel y leche hay en tu lengua y el perfume de tus vestidos es como aroma de incienso (Cantar de los Cantares 4 10-11)

Sor Nada llamada asiacute por humildad seguacuten dice el Indice de manuscritos de la Biblio-teca Nacional de Madrid es uno de los ejemplos maacutes desconocidos e interesantes que tenemos de la poesiacutea y prosa amoroso-religiosa del siglo XVII Hasta la fecha nunca se habiacutea publicado su obra e incluso hasta el antildeo 1995 para mi sorpresa no habiacutea copias microfilmadas de sus manuscritos en la Biblioteca Nacional Serrano y Sanz en su libro Apuntes para una Biblioteca de Escritoras Espantildeolas hace una escueta y pasajera mencioacuten de esta mujer y de su obra (68-69) siendo eso todo lo que hasta ahora se sabiacutea de ella Sus escritos consisten en los siguientes manuscritos

1 laquoEn queacute consiste un verdadero amor de Diosraquo 9 hojas uacutetiles en 4ordm letra del siglo XVII Biblioteca Nacional de Espantildea Manuscrito 1295926

2 laquoPintura del Propio Amorraquo laquoPintura del propio Amorraquo 10 hojas uacutetiles en 4ordm letra del siglo XVII Biblioteca Nacional de Espantildea Manuscrito 1295927

3 laquoEsplicacioacuten sobre en queacute consiste la paz del Almaraquo laquoQuartillas aacute un Alma que padece soledad interiorraquo 7 hojas uacutetiles en 4ordm letra del siglo XVII Biblioteca Nacio-nal de Espantildea Manuscrito 1295828

En cuanto a su persona soacutelo se nos dice que laquose encubrioacute con este seudoacutenimo laquoSor Nadaraquo Esta monja desconocida de origen hispanoamericano posee toda la frescura e ingenuidad de una joven apasionada metida por vocacioacuten u obligacioacuten a ejercer la profesioacuten maacutes comuacuten para mujeres de cierta clase social de su tiempo En sus liacuteneas podemos encontrar un misticismo simple incluso en algunos momentos infantil pero a su vez lleno de una fuerza y sensualidad interior poco comuacuten en escritos de este geacute-nero que desborda los liacutemites del laquoamor divinoraquo a traveacutes de los diaacutelogos entre el Alma y el Esposo Sor Nada consigue proyectar su amor a Dios maacutes allaacute de una experiencia romaacutentica Su experiencia es sincera y genuinamente miacutestica trascendiendo la imita-cioacuten o la propia creacioacuten poeacutetica ficcionalizada (Hatzfeld 30) Algunos pasajes son de un

147 Veacutease mi artiacuteculo Sor Nada ardores divinos de una monja adolescente escritos ineacuteditos de una monja profesa del siglo XVIIraquo Espeacuteculo Revista de estudios literarios 26 (2004) 1-10 Universidad Complutense de Madrid http wwwucmesinfoespeculonumero26sornadahtml

170 JUAN FRANCISCO MAURA

alto contenido eroacutetico con sustantivos y metaacuteforas que recuerdan la maacutes iacutentima unioacuten amorosa en unos casos y el tierno amor maternal en otros

[T]e miro Jesus mio desnudo a las inclemencias del tiempo y ardien-do en puro fuego de Amor por la salud de las Almas y me ensentildeas a que te ame con todo mi corason y puresa de espiritu No atendiendo ni buscando umanos intereses ni a solisitar consuelos ni regalos espi-rituales que suelen empantildear la puresa del noble corason No mi Jesus amable pues antes me ensentildeaste tu puro Amor que desnudo sean [sic] de encaminar mis passos desde el pesebre asta la cuna en donde te miro tan desnudo como el pesebre y todo Sentildeor por mi Amor (Mss 12959 26 hoja 1 v)

El manuscrito (12959 27) de la mencionada serie de tres contiene algunas correccio-nes quizaacute hechas por el confesor o quizaacute por ella misma cuando se dirige con excesiva familiaridad y arrebatado fervor a su Amado148 He escogido el manuscrito (12959 Caja 28) en primer lugar por ser el ejemplo maacutes representativo de su poesiacutea y prosa En este manuscrito encontramos de forma maacutes directa que alegoacuterica toda la frescura de un diaacutelogo entre Jesuacutes y el alma que raya como diriacutea Cervantes laquoa la llana y sin rodeosraquo (667 lib 2 cap 38) con el doloroso y a veces desesperado deseo de la entrega y la unioacuten final con el Amado La ortografiacutea no ha sido corregida respetaacutendose el texto ori-ginal149 Veamos el siguiente fragmento

Mira que te amo con Amor de padre y con Amor de esposo el mas fino y puro enamorado que no tan solo me presio de darte mi mano sino tambien todo mi cuerpo y sangre para que con mi pan de vida te sustentes y te regales a tus anchuras y que con mi propio espiritu vivas en paz como tu lo deseas y que mis amores sean unico alivio en tus trabajos en esta mortal vida pues si esto es asi y sabes que muero por darte vida dime esposa mia de que te fatigas Dame querida tus bras-sos y dime si me amas como yo te amo (Hoja 4)

148 La antologiacutea de Promis ha procurado insertar entre los textos antoloacutegicos algunos que se refieren a la es-critura de mujeres fundamentalmente de aquellos generados en el interior de los espacios conventuales Estos textos se fundan como laquohistorias de vidasraquo y responden casi siempre a los requerimientos de los confesores de las monjas coloniales En este sentido resulta valiosiacutesima la incorporacioacuten de la llamada Relacioacuten autobiograacute-fica de Sor Ursula Suaacuterez como una muestra significativa de la escritura monjil entendida en esta eacutepoca (como tambieacuten en la tradicioacuten europea medieval) inserta en las denominadas laquolabores de manoraquo de las religiosas ya que el texto escrito por mandato se convertiacutea en una suerte de entramado o tejido linguumliacutestico es decir en un nuevo bordado que la mayor parte de las veces el confesor convertido en censor iba haciendo tachando y enmendando En la antologiacutea Promis agrega un texto de Sor Tadea Garciacutea de la Huerta titulado Relacioacuten de la inundacioacuten que hizo el riacuteo Mapocho de la ciudad de Santiago de Chile en el monasterio de Carmelitas titular de San Rafael el diacutea 16 de junio de 1783 se trata de un poema tipo romance escrito en versos octosilaacutebicos y que da cuenta de lo sucedido ese diacutea en el convento (Resentildea de la literatura del reino de Chile de Joseacute Promis Eddie Morales Pintildea httpwwwupaclpublicaciones2002literatura_promishtm)

149 Son frecuentes las faltas ortograacuteficas Una de ellas es el uso constante del seseo La ausencia de acentua-cioacuten y puntuacioacuten exceptuando alguacuten punto o coma arbitrario no seguido casi nunca de mayuacutescula inicial lo mismo que el uso igualmente aribitrario de la h o de b v r q g j m n x etc No olvidemos de la misma forma la laxitud linguumliacutestica existente en el siglo XVII (no sabemos a queacute parte de eacuteste pertenece el manuscrito) asiacute como la joven edad de la monja

171ESPANtildeOLAS DE ULTRAMAR EN LA HISTORIA Y EN LA LITERATURA

Los versos del presente manuscrito poseen la misma fuerza que tiene su prosa Con una estructura estroacutefica indefinida estaacuten aparentemente corregidos por alguien que tu-vo la oportunidad de conocer personalmente a la autora Muy probablemente se trate del padre al que hace referencia al principio del primer manuscrito laquoMandame el Pd que le declare en que consiste un verdadero amor a Diosraquo a continuacioacuten continuacutea con su caracteriacutestica humildad laquo[O]bedesere y dire lo q Dios me inspire segun mi rudesa y simplisidadraquo (Mss 12959 26) En cuanto a la fuerza pasional de esta joven observamos con cierta tristeza coacutemo aparece sublimada en sus escritos con toda la enegiacutea de una joven mujer llena de intensidad y vida pero encerrada en los liacutemites de un convento Veamos un ejemplo en donde responde el Alma en los siguientes versos

O mi enamorado Jesus O mi dulse y tierno amanteO alegria de los sielos O dulse Jesus amable

(Toda Sentildeor me derrito toda Sentildeor me desagoy quiero vivir por ti ea sentildeor abrasadme) [Tachado en el original]

Toda Sentildeor me derrito toda Sentildeor me desagoy quiero morir por vos ea Sentildeor que ya acabo

Ya tus amores me llaman ya tus perfumes me traencon suspiros y agonias Sentildeor hasta que te alcanse

O mi Jesus amoroso no puedo mas dilatarmeya la pasiensia me falta dulse Jesus abrasadme

(No puedo vivir sin vos no puedo mas dilatarmeya la pasiensia me falta dulse) [Tachado en el original]

No puedo vivir sin vos mi dulse Jesus amablepues me teneis echisada siendo mi esposo y mi Padre

Ay que me abraso Ay que me quemo del Amor deJesus nasareno como no tocan y tantildeen a fuego150

Estos versos llenos de arrebato sublimado conectan con toda la tradicioacuten miacutestica es-pantildeola que se remonta a Ramoacuten Llul y que culmina en el maacutes universal de nuestros

150 En toda la fuerza y simbologiacutea del amor maacutes iacutentimo del maacutes alto y sublime placer de la unioacuten de los amantes tal como lo encontramos en el Cantar de los Cantares y en San Juan de la Cruz Leemos en la Biblia

Ya me he quitado la tuacutenica iquestCoacutemo volver a vestirme Ya me he lavado los pies iquestCoacutemo volver a ensuciarlosMi amado metioacute su mano por el agujero (de la llave) y mis entrantildeas se estremecieron por eacutel Me levanteacute para abrir a mi amado Mis manos destilaron mirra y mis dedos mirra exquisita en el pestillo de la cerradura (5 3-5)

Nos ocurre lo mismo con San Juan de la Cruz en su insuperable poema laquoLlama de amor vivaraquo

iexclOh cauterio suaveiexclOh regalada llagaiexclOh mano blanda iexclOh toque delicadoque a vida eterna sabey toda deuda pagaMatando muerte en vida la has trocado

172 JUAN FRANCISCO MAURA

miacutesticos San Juan de la Cruz Esta tradicioacuten se extiende hasta finales del siglo XVII esto es hasta los finales del Barroco siendo un poco maacutes tardiacuteo en la Ameacuterica espantildeola Sin tener como propoacutesito discutir en el presente trabajo a queacute corriente miacutestica pertenece la obra de Sor Nada es necesario resaltar no obstante el hecho de que estaacute escrito por una mujer y ademaacutes de tierna edad El manuscrito 12959 Caja 26 termina con estas pa-labras laquo[T]odas estas boverias escrivi por entretenimiento siendo resien profesa en la religion Sor Nadaraquo Mas no por la juventud de su autora los escritos dejan de tener lo-gradas metaacuteforas imaacutegenes y siacutembolos sacados de la naturaleza La alegoriacutea de la unioacuten matrimonial poseeacute el fuego liacuterico de la maacutes apasionada de las relaciones amorosas vivi-ficada por perfumes flores insectos animales escarchas nieves o abrojos Por lo tanto aunque la narracioacuten destile cierta ingenuidad no carece por ello de un vocabulario rico con el sabor popular de la poesiacutea de los cancioneros y romances de tradicioacuten renacen-tista No ha sido otra mi intencioacuten que la de rescatar del olvido unos escritos en prosa y en verso llenos de frescura y espontaneidad que nos muestran la pasioacuten con que la joven novicia se laquoentrega en cuerpo y almaraquo a los menesteres de su profesioacuten guiada por un padre espiritual en esos primeros antildeos de formacioacuten Esta ha sido la razoacuten por la que presento a continuacioacuten el citado manuscrito en su totalidad

Sor Nada (Mss 1295928)

laquoEsplicacion sobre en que consiste la paz del AlmaraquolaquoQuartillas a un Alma que padece soledad interiorraquo

[7 hojas utiles en 4ordm letra del siglo XVII]

+

Esplicacion sobre en que consiste la paz del Alma

Pareseme segun mi rudo entender que la verdadera paz del Alma con-siste en una muy pura y buena consiencia en un corason liso y bien intensionado en una verdadera rectitud de espiritu en el qual el Alma procura bolar a Dios sin jamas detenerse a respetos umanos ni reparar en que me diran ni de que me censuraran sino me apresuro a seguir a unos entenderes y pareseres dorados en los quales pretende el mundo engantildear y ensuciar si se puede la puresa de un corason unicamente de Dios y de su Santa ley y se lo conserva cristalino con la divina asis-tencia de la gracia y comprendido de su Amor y temor siguiendo la luz divina de tan amante Sentildeor Dios y ombre verdadero con que este ilustrado corason ni se altera ni se mueve por los disfrasses dorados que ase el mundo y sus moradores mayormente con falssas amistades aunque con ellos muestre buena intension Con la misma grasia y luz de Dios conose el buen corason estos disfrasses que le ase el mundo y se retira de todo con espiritu y valor esto sin la menor alterasion sino que en suma paz se retira a buscar a Dios dentro de su mismo corason

173ESPANtildeOLAS DE ULTRAMAR EN LA HISTORIA Y EN LA LITERATURA

y se abrasa con su pura verdad en la qual se le descubren mil interio-res secretos tan solidos puros y verdaderos que la misma Alma queda abismada y de puro grandes no los puede bien comprender ni esplicar pero estos mismos secretos divinos le sirven de espuelas para no solo correr sino bolar con pies de plumas en seguimiento de su bien ama-do Jesus y como este soberano Sentildeor es tan amante de sus espossas las Almas luego que la ve bolar con pies de plumas la sale al encuen-tro en despoblado campo que se deve de llamar Campo de Amor de Dios y el mismo Sentildeor se viene a las manos por ser Dios que nos ama con Amor infinito de Padre benigno y amoroso con que asiendose en contra deso este divino enamorado en lo interyor de el Alma que le busca con ansias de servirle y amarle y en aquella soledad traban una conversasion amorosa y sensilla como la pluma simple de quien esto escrive

Divino enquentroDios y el Alma en la soledad

O Soberano Principe de la paz dise el Alma tus perfumes me traen a ti bolando porque alla en el mundo y sus valedores me pretendian engantildear y entretenerme con pegaminossas amistades que facilmen-te me pudieran envenenar y matarme apartandome de ti Mi dulse Jesus amable mi Redentor Soberano que con tantas ansias me sales al enquentro como siervo [ciervo] erido de mis Amores los quales tu Amor me ofrese para que con tu mismo Amor te ame y te sirva en paz sin perturbarme ni contristarme ni cansarme de padeser pasando si se ofrese por escarchas nieves espinas ni abrojos ni por otros diverssos trabajos ni piedras de contradision que tu me puedes permitir pues por mas que el mar se levante con sus ferosses olas contra mi ni piedras se me tiren al rostro en todo Sentildeor me quieres con serenidad pasifica sin la menor perturbasion Todo Sentildeor quieres que lo tome con Serenidad de espiritu y asi vengo a ti bolando para que mejor me ensentildees a vivir segun las leyes de tu noble condision que me son muy agradables por mas que el mundo me las despresie por segir sus vanidades y torsidas intensiones con apariensias de bien y con este engantildeo y bien me quie-ro mas a mi que no a mi proximo veo que segun mi pareser se pierden muchas Almas y tambien de aquellos que se depresian y pasan por muy espirituales Con que me paresen pocos los que llegan a padeser con desnudes151 de espiritu por tu purisimo Amor y me parese essas se quedan muy atrasadas en la virtud por el peligro de bolver muy atras el paso de modo que se pueden despentildear y pereser en su misma desgra-sia ya por soberbia o por otras enfermedades que se les pega al corason y asi lo pasan como siegos ignorantes sin advertir en sus peligros

151 La letra en cursiva es miacutea

174 JUAN FRANCISCO MAURA

este aquerdo Sentildeor y otros que tu verdad me ensentildea me ase venir uyendo de las paredes del mundo y me vengo a ti Dios mio bolando con las dos Alas del Amor y temor que tu mismo Amor me ofrese tan de gracia y tan de grado que no se duentildeo mio con que lo responder a tan soberano beneficio y finesa de tus entrantildeas de Amorvengo Sentildeor y esposo mio unicamente a descansar en ti pues los peli-gros del camino me an puesto en mucho sobresalto temiendo el per-derte y sin ti perderme para siempre por una eternidad sin fin pues deseo amado mio ganarme ganandote a ti y vivir en ti aora en vida y despues eternamente y estos cuidados me traen fatigada molida y cansada y no podre tener alivio y descanso sino viendome entre tus brassos aunque sea estando en cruz pues ese es el fin de mis deseos vivir y morir en ti ablame mi cordero manso y ensentildeame a que ver-daderamente te ame como fiel esposa ea mi caro amigo dame la ma-no pues sabes Amor mio que en mi no ay mano sin tu misma mano y asi mi Dios y Sentildeor mi Principe Soberano con umilde rendimiento y deseos de alcansarte te suplico me des la mano y me consueles en estos mis trabajos Deseo Sentildeor vivir en paz y los malos amores de mi Naturaleza flaca no me dejan detentar y no quieren por mi desgrasia atropellar con las leyes de tu Amor ni quisiera perturbar mi corason quando me veo con un torvellino de olas y contratiempos que a menu-do me suelen sercar pero si tu Sentildeor me das la mano nada temo sino que me aseguro y vivire en paz sin que me fatiguen los contratiempos pues mi mano en la tuya y mi espiritu en el tuyo por mas borrascas que me envistan no seran bastantes para rendir mi voluntad a la suya bien si para pronunsiar un fiat que resuene bien atras en tus oidos y que en medio de mis fatigas me ponga a cantar tus divinas misericor-dias hea Sentildeor ya pretendo serrar mis labios por no desir mas bove-rias y deseo Sentildeor oir tus palabras de vida eterna abla Sentildeor que tu sierva oye con atension y cuydado mira mi Dios que se me ase tarde y espero con prisa deseando saborearme y aprovecharme de los ecos de tu Santa dotrina pues todas tus palabras saben a eterna vida callen pues mis sentidos y potensias y todo se ponga en paz pues mi dulse y soberano Sentildeor no se escusara de ablar me aun que en mudo silensio hea mi gran Prinsipe de la paz ablame que tus puros amores me traen perdida por estos asperos montes y mis cortos pasos no te pueden dar alcanse mirame mi Dios a tus pies postrada como un vil gusano y me-nor ormiga de la tierraabla Jesus y dise a su esposa el Alma querida esposa mia que me pides y por que te muestras tan fatigada y mal sufrida no vives como corde-rita del campo buscando de mis pechos el sustancial pasto mi Amor no te sustenta y mi grasia te promete eterna vida pues dime amada de que te fatigas y te muestras mal sufrida mira que te amo con Amor de padre y con Amor de esposo el mas fino y puro enamorado que no tan solo me presio de darte mi mano sino tambien todo mi cuerpo y

175ESPANtildeOLAS DE ULTRAMAR EN LA HISTORIA Y EN LA LITERATURA

sangre para que con mi pan de vida te sustentes y te regales a tus an-churas y que con mi propio espiritu vivas en paz como tu lo deseas y que mis amores sean unico alivio en tus trabajos en esta mortal vida pues si esto es asi y sabes que muero por darte vida dime esposa mia de que te fatigas Dame querida tus brassos y dime si me amas como yo te amoResponde el Alma152 Tu mi Dios sabes si yo te amo pues de mi solo se que mis deseos y ansias buelan a ti mas no alcanso a saber si te amo como tu de-seas ser amado y como desconfio tanto de mi y de mis prosederes falssos temo Dios mio perderme y perderte y asi Sentildeor pues no desechas mis Amores y te muestras tan fino en amarme te pido me ensentildees a vivir segun las leyes de tu pura verdad y fina condisionhija mia dise Dios la prueva de un verdadero Amor consiste en sufrir callar y padeser por mi unico Amor y en todo seguir mis pasos sin ja-mas retroseder por mas fragoso que se muestre el camino pues nunca seran tantas las espinas las escarchas ni las nieves ni los vientos bo-rrascosos que te se ofrescan pasar por mi Amor como los que mi tierno y desinteresado Amor paso por ti y siempre con mis pies descalssos y asi hija y esposa mia muestrate costante en seguir lo perfecto de mis passos pues mi braso fuerte sera en ti y peleara por ti y te sera el todo en tus nesesidades y mi Amor te convertira en dulse y suave lo amargo y molesto a la condision de la carrne

Responde el Alma

O mi enamorado Jesus O mi dulse y tierno amanteO alegria de los sielos O dulse Jesus amable

(Toda Sentildeor me derrito toda Sentildeor me desagoy quiero vivir por ti ea sentildeor abrasadme) [Tachado en el original]

Toda Sentildeor me derrito toda Sentildeor me desagoy quiero morir por vos ea Sentildeor que ya acabo

Ya tus amores me llaman ya tus perfumes me traencon suspiros y agonias Sentildeor asta que te alcanse

O mi Jesus amoroso no puedo mas dilatarmeya la pasiensia me falta dulse Jesus abrasadme

(No puedo vivir sin vos no puedo mas dilatarmeya la pasiensia me falta dulse) [Tachado en el original]

No puedo vivir sin vos mi dulse Jesus amablepues me teneis echisada siendo mi esposo y mi Padre

152 La aparicioacuten de una mayuacutescula al principio de una oracioacuten es algo totalmente arbitrario en este ma-nuscrito dada la libertad ortograacutefica de la autora Como se puede observar en la mayor parte de las veces no es el caso

176 JUAN FRANCISCO MAURA

Ay que me abraso Ay que me quemo del Amor deJesus nasareno como no tocan y tantildeen a fuego

Responde Jesus Hija mia tus simples vozes oygo y aunque resuenan bien a mis oidos pero te deseo mas mansa y pasifica en tus fervores ya sabes que no siempre as de vivir en mantillas ni a los pechos de tu Madre por que es rason que padescas con espiritu fuerte como mu-jer valerosa por que a una esposa del Rey soberano y prinsipe de la paz no le estan bien chiquerias ni fervores de nintildea malcriada y ya es ora que la destete su Madre la Naturaleza y que empesando su nueva vida camine con el favor de mi grasia sigiendo mis passos de eterna vida esto con sus pies descalssos segun mis leyes de Amor puro y desinteresado lo tienen ordenado153 y vivir en paz como lo deje en-cargado a mis apostoles Santos repitiendoles varias vezes Vivir en pas y caridad esto es un vivir en Dios y Dios en el Alma y asi hija mia el Alma que vive en paz vive en mi Como mis cortesanos en el cielo y pues me pides que te ensentildee a vivir segun las leyes de mi condision Repito el desir que te debes mostrar sufrida en todo tiempo y estado sin permitir en tu corason que ni aun los fervores se adelanten con estremos ni ademanes sino atiende y aprende de mi purisima Madre pues siempre la veras si bien lo consideras que mientras vivio en el mundo en todos sus trabajos se mostro firme fuerte costante como piedra diamante Pues mirandome nintildeo entre sus brasos desnudo en el pesebre desnudo y crusificado en los brassos de una cruz En estos y otros passos no se mudo su rostro sino que en suma serenidad y pasifico corason toda se sacrificaba enteramente en los brassos de mi Amor y rendido su corason y voluntad en la de mi eterno Padre por ejemplo te la doy y deseo que aprendas de sus nobles calidades pues te aseguro carisima que las leyes de mi condision y pura verdad todo lo allaras enserrado en el corason de mi purisima Madre sedle fiel y descansaras en paz

+

Quartillas a un alma que padese soledad interior

1Un Alma afligida y tristese ve en un campo desiertay en el su esposo la tieneAtormentada y sedienta

153 Es a traveacutes de estas liacuteneas lo que hace suponer que la autora de este diaacutelogo amoroso entre el Alma y Je-suacutes es novicia esto es laquoque estaacute empesando su nueva vidaraquo En las mismas liacuteneas una vez maacutes se hace alusioacuten al laquodesteteraquo de su vida civil laquoa una esposa del Rey soberano y principe de la paz no le estan bien chiquerias ni fervores de nintildea malcriada y ya es ora que la destete su Madre la naturalesaraquo (fol 5)

177ESPANtildeOLAS DE ULTRAMAR EN LA HISTORIA Y EN LA LITERATURA

2Pendiente se ve en el AyreSolo un hilo la sustentasin tocar el pie en el sueloporque del no tome tierra

3Mirandola esta yto a ytoaquel sol que la atraviesay la enviste con sus rayosmas ella no pestantildeea

4Como sigarra padese y como a tal se atormentabatiendo sus mismas Alasy el corason se atraviesa

5Con penas sustos temoresquando se mira assi mesmasin tener valor en nadaporque es la misma flaquesa

6Pero el Amor de su esposotoda su atension le llevay la pone en un abismopero cubierto en tiniebla

7Desea dar algun bueloy subir con ligeresapero se mira travadacon una fuerte cadena

8Clama suspira y padeseMas del todo se sujetaRindiendo su voluntadA la divina clemencia

9Los enemigos del AlmaCruelmente le asen guerray ella aunque firme y constantelos reselos la atormentan

178 JUAN FRANCISCO MAURA

10de todos modos padeseaunque gosa la asistensiadel divino esposo amadoque en su interior se recrea

11Solo de verla penary con verla tan serenadise resibe mil gustosde su sigarra pequentildea

12Le sabe el mundo a mil yelesy su trato le atormentaviendo en el mil falsedadesque todas saben a tierra

13Para poderse librardeja de correr y buelacon las Alas del Amory el mismo Amor se la lleva

Una vida dedicada a un amor divino un amor que le haraacute llenar un buen nuacutemero de cuartillas dedicadas a tan alta empresa Se desconoce si la vocacioacuten de Sor Nada con-tinuoacute con tanta intensidad el resto de sus diacuteas Ciertamente la vida en el covento no era faacutecil En algunos casos la experiencia era traumaacutetica incluso fatal para algunas de las adolescentes de la Ameacuterica Espantildeola Las reglas del claustro eran severas por varias razones Estas joacutevenes si no teniacutean el permiso de la superiora no podiacutean recibir visitas no podiacutean volver a sus casas su correspondencia era censuraba y no podiacutean salir del periacutemetro conventual Igualmente se levantaban antes del amanecer para oir misa tra-bajaban el resto del diacutea y lo maacutes interesante es que muchas veces esta vida era aceptada por muchas

Page 14: Tercera parte: Mujeres en la vida intelectual - …parnaseo.uv.es/Editorial/Maura/TerceraParte.pdf · La Biblia, por su parte, hace repetidas menciones de la mujer y sobre el comporta-

144 JUAN FRANCISCO MAURA

que les cuelgan de la frente les daraacute dolor de cabeza y por cinta de ca-deras de oro muy esmaltadas y labradas les daraacute sogas de muy aacutespero esparto con que se cintildean y aprieten y por aquellos sus muy curiosos y suntuosos ataviacuteos de su cuerpo les daraacute siacutelici y desta manera haraacute Dios que lloren su lascivia y desorden y que de su lujuria y deshonestidad hagan grave penitencia Entonces no habraacute quien las quiera por su he-diondez y miseria en tanto que siete mujeres se encomendaran a un varoacuten y eacutel de todas huiraacute menospreciaacutendolas y aborrecieacutendolas como de gran mal (Villaloacuten 860-61 vol 2 canto 20)

Excelente lista de aderezos femeninos de los cuales pocos son reconocibles en nues-tros diacuteas Gran frustracioacuten debiacutea de tener con las mujeres el autor de estas liacuteneas sien-do al parecer muy poco correspondido por estas uacuteltimas La misoginia que aparece en estas liacuteneas refleja cierta ingenuidad La mujer que se nos presenta debioacute de ser bastante atractiva y sofisticada portando una gran variedad de adornos muchos de ellos de origen oriental y de perfumes que poco tendriacutean que envidiar a los de la mujer moderna En Descripcioacuten breve de toda la tierra del Peruacute Tucumaacuten Riacuteo de la Plata y Chile obra escrita en Chile entre 1603 y 1609 por el padre Reginaldo de Lizarraga nacido en Medelliacuten (Espantildea) en 1545 y trasladado a Ameacuterica a los quince antildeos vemos una asombrosa semejanza con la cita anterior En esta obra del padre dominico dedicada al entonces presidente del Consejo de Indias conde de Lemos observamos coacutemo su descripcioacuten de la vestimenta de las mujeres de Lima ofrece notables semejanzas con la escrita unos antildeos antes en Espantildea En su capiacutetulo 51 titulado laquoDe los vestidos de las mujeresraquo dice lo siguiente

Lo que en esta ciudad [Lima] se admira mucho y aun lo que se ha-biacutea de refrenar es los vestidos y trajes de las mujeres son en esto tan costosas que casi no se sabe como lo pueden sufrir sus maridos La soberbia de ellas es demasiada y no sabemos en lo que han de venir a parar plegue a Dios y no sea en lo que pararon aquellas de quien dice Nuestro Sentildeor Porque las hijas de Sioacuten se ensoberbecieron (esto es las ciudadanas) cuando saliacutean de sus casas llevaban las gargantas ex-tendidas los ojos altos a una y otra parte guintildeaacutendolos los pasos muy compuestos el Sentildeor las volveraacute calvas y les raeraacute los cabellos de sus cabezas les quitaraacute sus chapines y jerbillas bordadas las medias lunas rodetes las cadenas y collares de oro las ajorcas los tocados costosos los punzones de oro para partir las crenchas los zarcillos y los olores los anillos y piedras preciosas etc y por los olores seles daraacute muy pes-tilencial olor y por las cintas de oro sogas de esparto etc No creo yo hay en lo descubierto del mundo ciudad en su tanto ni cuatro veces mayor que a tanta soberbia en este particular como esta nuestra ciu-dad [Lima] llegue acueacuterdome que los antildeos pasados maacutes ha de treinta y ocho que llegando un religioso nuestro de Espantildea nacido y criado en Toledo a nuestro convento de esta ciudad cerca de la fiesta de Cor-pus Christi tratando de ella y de la suntuosidad majestad y riqueza que aquel diacutea en Toledo en calles y ventanas se mostraba le deciacuteamos que no nos espantase porque en nuestra ciudad veriacutea coacutemo no le ha-

145ESPANtildeOLAS DE ULTRAMAR EN LA HISTORIA Y EN LA LITERATURA

ciacutea mucha ventaja Toledo Llegoacute la fiesta vio la riqueza que se mostroacute en los vestidos de las mujeres adornos de ventanas altares y calles dijo que la riqueza de Toledo en este diacutea mostrada no haciacutea muchas ventajas a la de esta ciudad Pues es cierto que hay tanta diferencia de entonces ahora en lo que vamos tratando como de vestidos de aldea a vestidos de corte con justo tiacutetulo se podriacutea moderar por los virreyes esta soberbia pero no seacute por queacute no se modera y siacute seacute por queacute ni los maridos no tienen aacutenimo para moderarlo ni los gobernadores tampo-co (Lizarraga 38 lib 1 cap 51)

Seriacutea injusto y exagerado afirmar que los descubrimientos transoceaacutenicos se hicieron por la presioacuten que ejercieron las mujeres sobre sus amantes para que estos les trajesen laquomaacutes raacutepidamenteraquo todo ese laquosin finraquo de delicadezas exoacuteticas de todo tipo que existiacutean en el Oriente Lo que siacute es cierto es que las mujeres fueron grandes consumidoras de perfumes afeites sedas joyas y otros bienes suntuarios siendo muy conscientes de lo que hoy entendemos como laquomodaraquo Martiacuten Fernaacutendez de Navarrete en su indispensa-ble trabajo sobre los primeros viajes transoceaacutenicos Coleccioacuten de los viajes y descubrimien-tos menciona de paso la situacioacuten de algunas mujeres durante el siglo XV Es precisa-mente esta eacutepoca en la cual portugueses y castellanos entran en conflicto por el control de algunas posesiones en las costas africanas

y crecioacute el lujo a tal extremo que aun las mujeres de los menestrales y artesanos se confundiacutean en los vestidos con las de alto linaje y esta-do usando ropas de ricas telas de seda de oro de lana con forros de martas y pieles y con guarniciones de oro plata y aljoacutefar cuyo gasto por ser ruina de las familias se tratoacute de corregir aunque sin efecto en las Cortes de Palenzuela (M Fernaacutendez de Navarrete 75 21)

El mismo autor resalta la importancia que tuvo para el comercio de Castilla el contar con una buena armada que protegiese a los barcos de piratas y otros peligros Gracias a los inventarios que se han conservado del duque de Beacutejar y de don Alvaro de Zuacutentildeiga conocemos el lujo de estos sentildeores en perlas orientales piedras preciosas telas y demaacutes utensilios de gran valor134 Existe una Real Pragmaacutetica de Fernando el Catoacutelico a Diego Coloacuten en donde aparece nuevamente la conciencia que se teniacutea sobre la manera de ves-tir que deberiacutean llevar las damas castellanas

R PRAGMAacuteTICA SOBRE EL VESTIR Y GASTAR SEDA EN LAS IN-DIAS Valladolid 12 de noviembre de 1509 Don Fernando etc A vos Don Diego Coloacuten nuestro Almirante y Gobernador de las Indias del mar Oceacuteano y a otro cualquier mi Gobernador etc Sepades que yo he sido informado de los muchos gastos y costas que se han hecho y facen y se esperan hacer si yo no lo mando proveer y remediar en el vestir y gastar de las sedas y brocados y bordados en la Isla Espantildeola y en las otras islas y poblaciones de las dichas islas del mar Oceacuteano tra-yendo en ello mucho desorden y yo por el amor y voluntad que tengo

134 AGI Indiferente 418 Libro 2 fol 87v Publicada en DH Am Tom 6 paacutegina 191 DIA Tomo 31 pag 470 DIU Tomo 5 paacuteg 166 Seguacuten la RC a Diego Coloacuten fechada a 14 de noviembre de 1509 es la pragmaacute-tica que se guarda en Castilla sobre la manera de vestir (DIU Tomo 5 paacutegina 174)

146 JUAN FRANCISCO MAURA

a esas dichas Indias y a los pobladores dellas y porque deseo que ellas se aumenten y acrecienten por las haber ganado y descubierto por la gracia de Nuestro Sentildeor con nuestra industria trabajo y costa y los po-bladores dellas no hagan sobre lo suso dicho tan excesivos gastos sino pues que van a ellas con deseo y voluntad de se ayudar y aprovechar del oro que por gracia de Nuestro Sentildeor se descubre de cada diacutea se detengan en lo gastar en semejantes cosas para se aprovechar dellos en otras cosas que maacutes les convenga asiacute para sus personas como para sus haciendas y por evitar y excusar lo suso dicho mandeacute lo platicar con algunos de mi Consejo y por ellos visto se halloacute que porque nuestros suacutebditos y naturales que viven y estaacuten en dichas Indias no gasten sus haciendas en semejantes desoacuterdenes y que las conserven y guarden pa-ra sus menesteres y por el bien y el pro comuacuten de todos generalmente mando dar esta mi carta premaacutetica sancioacuten la cual quiero y mando que haya fuerza y vigor de ley bien ansiacute y a tan cumplidamente como si fuese fecha y promulgada en Cortes por lo cual ordeno y mando que en cuanto a mi merced y voluntad fuere ninguna ni algunas personas de cualquier ley estado condicioacuten que sean que estuvieren de morada o vivienda o en otra cualquier manera en la dicha Isla Espantildeola y en las otras islas desas dichas Indias y tierra firme no puedan traer y traigan ropa alguna de brocado ni de seda ni de chamelote de seda ni zarzahaacuten ni tercenel ni tafetaacuten ni vainas ni correas de espada ni en cinchas ni en sillas ni en alcorques ni en cosa alguna ni tampoco puedan traer ni trai-gan bordados de seda ni chapado de plata ni de oro de martillo ni fila-do ni tejido ni de otra cualquier manera pero que las personas que tu-vieren en las dichas Indias bienes asiacute muebles como raiacuteces que valgan hasta la cuantiacutea de mil castellanos que ellos y los hijos que tuvieren de hasta edad de catorce antildeos traigan jubones y caperuzas y bolsas y ribe-tes y pestantildeas de seda de cualquier color que quisieren con tanto que en una ropa no traigan maacutes de un ribete y que no haya en los dichos ribetes y pestantildeas maacutes anchura de cuanto un dedo pulgar y que no se traiga en los ruedos de las ropas y que puedan traer becas de tercenel y de tafetaacuten y de papahigos de camino aforrados en el mismo tercenel y tafetaacuten y ansiacute mismo permitimos que puedan traer de seda las cora-zas y guarnecer las faldas y gocetes y capacetes y baberas y quejotes y traer cojines de seda en la silla de la jineta y que las mujeres de las tales personas que tuviesen bienes en la dicha cuantiacutea de los dichos mil castellanos y sus hijas siendo doncellas puedan traer gonetes y corseacutes y fajas de dos varas de largo de seda y [borradas dos letras por mancha de tinta] mas y de lo de vestir y mudar cuando quisieren y por bien tuvieren quier sea moyil o faldilla o cota o haacutebito u otra cualquier ropa con tanto que juntamente no puedan vestir ni vistan maacutes de una ni les pongan trepas ni tiras de seda ni de brocado ni de oro tirado ni tejido ni relido ni en las ropas de pantildeo pongan cortapisas ni lisonjas ni trepas ni tiras ni otra guarnicioacuten alguna de seda ni de brocado salvo que puedan traer un ribete o pestantildea de seda de anchura de un dedo pulgar asiacute en

147ESPANtildeOLAS DE ULTRAMAR EN LA HISTORIA Y EN LA LITERATURA

las ropas de seda como en las de pantildeo en los ruedos de las faldas y para las costuras y no otra cosa alguna y que no traigan la dicha seda en las guarniciones de las mulas ni en angarillas ni en sillas ni en pantildeos ni en otra cosa alguna y que ansiacute mismo no puedan traer mantillas de seda ni enforradas en seda sopena que l que contrario hiciere pierda las ro-pas que ansiacute trujere vestidas por primera vez y sea repartido la mitad para el juez que lo juzgare y la otra mitad para el juez que lo acusare y por la segunda que pierda la ropa y se parta como dicho es y sean desterrados de la isla donde viviere para dos antildeos y por cuanto algu-nas personas de los que nuevamente destos reinos de Castillaa van a se avecindar y poblar y estar en las dichas Indias y son de honra acae-ce que no llevan tantos bienes que valgan la dicha cuantiacutea de los mil castellanos que mando que tengan los que hubieren de traer seda en la manera que dicha es que a eacutestos tales no se entienda y extienda lo suso dicho y que puedan traer la dicha seda seguacuten y en la manera que dicha es y no maacutes hasta tanto que haya un antildeo que estaacuten en las dichas Indias que corra y se cuente desde el diacutea que llegare fasta ser cumplido y que siacute cumplido no tuviere bienes que valgan la dicha cuantiacutea de los dichos mil castellanos que no puedan traer seda ninguna so la dicha pena de suso contenida la cual mando a vos las dichas nuestras justi-cias y a cada una de vos que esta mi carta y todo lo en ella contenido y cada cosa y parte dello guardeacuteis y cumplaacuteis y ejecuteacuteis por manera que se cumpla y ejecute lo en ella contenido so pena de perdimiento de los oficios y que seades inhaacutebiles para haber otros semejantes y que pagueis la estimacioacuten de la tal ropa que dejardes de ejecutar y para que lo susodicho sea notorio y ninguno dello pueda pretender ignorancia mando que esta mi carta sea pregonada puacuteblicamente por las plazas y mercados y otros lugares acostumbrados desas dichas islas por prego-nero y ante escribano puacuteblico(Konetzke Coleccioacuten 23)135

Tambieacuten se sabe de las joyas que Rodrigo Ponce de Leoacuten marqueacutes de Caacutediz debioacute dar a dontildea Beatriz Pacheco (M Fernaacutendez de Navarrete 75 22) Lo que siacute queda claro es que la navegacioacuten seraacute a partir de estos antildeos la forma maacutes raacutepida e importante para comerciar con aquellos paiacuteses de Oriente que antes soacutelo era posible alcanzar a traveacutes de rutas terrestres Existe un documento muy representativo de este periodo sobre la posesioacuten de joyas de gran valor por parte de miembros de una de las familias maacutes repre-sentativas residentes en Ameacuterica Los protagonistas son en este caso el almirante Diego Coloacuten y su mujer Mariacutea de Toledo Dice el documento que El jurado Antoacuten Bernal y Juana de Hoces su mujer vecinos de Sevilla en la collacioacuten de Santa Cruz reciben de Diego Coloacuten Almirante de las Indias laquoun joyel muy rico de oro de hechura de escudo que tiene en medio una piedra preciosa grande esmeralda e debaxo de la dicha piedra un rostro de aacutengel labrado en el mismo oro esmaltado e a cada lado del dicho rostro una piedra preciosa diamante pura y debaxo una piedra gruesa pendiente que pesa el dicho

135 AGI Indiferente 418 Libro 2 fol 87v Publicada en DH Am Tom 6 paacutegina 191 DIA Tomo 31 pag 470 DIU Tomo 5 paacuteg 166 Seguacuten la RC a Diego Coloacuten fechada a 14 de noviembre de 1509 es la pragmaacutetica que se guarda en Castilla sobre la manera de vestir (DIU Tomo 5 paacutegina 174)

148 JUAN FRANCISCO MAURA

joyel con todo lo susodicho medio marcoraquo Los citados Antoacuten Bernal y su esposa se dan por pagados de todo lo que se les adeudaba y se obligan a su vez a devolver el joyel al Almirante si este les paga en dinero El 23 de agosto de 1530 siete antildeos despueacutes la virreina canceloacute la anterior obligacioacuten y recuperoacute el mencionado joyel (AHPS Libro del antildeo 1523 Oficio I Escribaniacutea Alonso de la Barrera Folio 1173 Fecha 3 de diciembre) En la misma casa del almirante otra mujer Briolanga Muntildeiz su tiacutea materna se obliga a pagar al mercader genoveacutes Batista Catantildeo 22 ducados de oro laquopor cierto raso que le comproacute y habiacutea de ser pagado en el puerto de Santo Domingoraquo (AHPS Libro del antildeo 1509 Oficio V Libro uacutenico Escribaniacutea Francisco Esquibel Folio Primer tercio del lega-jo Fecha 9 de marzo) Dontildea Briolanga recibiacutea cada antildeo para su mantenimiento 100000 maravediacutes del almirante mayor de las Indias por medio de Gaspar Gurricio monje del monasterio de Santa Mariacutea de las Cuevas (AHPS Libro 1510 Oficio XV Libro II Es-cribaniacutea Bernal Gonzaacutelez Vallesillo Folio primer tercio del legajo Fecha 4 de julio) Resulta interesante hacer notar la temprana presencia (1516) de un ingleacutes en Santo Domingo involucrado igualmente en la compra de telas Se trata de laquoNicolas Arnoteraquo residente en Santo Domingo que debe pagar a Mariacutea Caldera mujer del comendador Diego Barbosa el valor de una cama de sargas de colores de Flandes (AHPS Libro del antildeo 1516 Oficio XV Libro II Escribaniacutea Bernal Gonzaacutelez Vallesillo Folio Primer tercio del legajo Fecha 28 de agosto) Sin embargo anteriormente a esa fecha (1514) encontramos a un veneciano casado con una inglesa mucho maacutes ceacutelebre en sus viajes trasoceaacutenicos laquoSevastiaacuten Cavotoraquo capitaacuten del rey don Fernando y vecino de Sevilla136

De forma paralela se observa tambieacuten un cierto desenvolvimiento de la mujer en su medio lo que equivaliacutea a intercambios de informacioacuten a todos los niveles incluyendo por lo tanto el cultural No era extrantildeo que tuviesen libros de comedias a mano y que llegasen incluso a escribir comedias ellas mismas Efectivamente la sospecha de que las damas llegasen a escribir comedias estaba bien fundada Veacuteanse algunos ejemplos Ana Caro Malleacuten de Soto una de las maacutes famosas dramaturgas de la Sevilla del siglo XVII autora de El conde de Partinupleacutes utiliza el tema del amor en sus maacutes diversas variantes fiacutesicas y espirituales como el eje de casi todas sus obras (Perry 57) Este hecho por otra parte indica el favor del puacuteblico ante un tema tan popular Veacutease otro ejemplo

The drama of this period did not present love and marriage as a simple partnership however and many dramatists contrasted laquoprofaneraquo with laquohonestraquo love Feliciana Enriacutequez de Guzmaacuten who wrote Tragicome-dia Los jardines y campos sabeos in Seville in the early seventeenth cen-tury presented the hero Clarisel as the victim of laquopervertedraquo and fickle Belidiana in part 1 so blinded by her beauty that he feels himself laquoin shackles and in chainsraquo (Perry 57)

Pero las damas espantildeolas de esta eacutepoca no soacutelo escribiacutean comedias algunas tambieacuten se aventuraron a escribir tratados cientiacuteficos Uno de estos casos fue el de Oliva Sabu-co de Nantes Barrera que a finales del siglo xvi escribioacute un tratado meacutedico sobre la naturaleza humana advirtiendo que la lujuria podiacutea perjudicar al cuerpo Se basaba en

136 Sebastiaacuten Caboto o laquoSevastiaacuten Cavotoraquo estaba casado con Juana Cavoto vecina que fue de la ciudad de Londres en la parroquia de San Gil (AHPS Libro del antildeo 1514 Oficio I Libro II Escribaniacutea Mateo de la Cuadra Folio 253 Fecha 14 de Septiembre) citado en CFAAPS Vol 3 doc 128 p 37

149ESPANtildeOLAS DE ULTRAMAR EN LA HISTORIA Y EN LA LITERATURA

la presuncioacuten de que la lujuria provocaba que el cerebro emitiese un liacutequido que iba al estoacutemago enfriaacutendolo y debilitaacutendolo interrumpiendo de esta manera las funciones vitales (Perry 58)

Se sabe que en la eacutepoca de Isabel la Catoacutelica habiacutea muchas mujeres estudiantes y que la propia reina las impulsaba a estos menesteres iniciativa que obtuvo sus frutos en las deacutecadas siguientes Ademaacutes de las conocidas novelistas Mariacutea de Zayas y Sotomayor y dontildea Mariana de Carvajal existioacute toda una serie de escritoras de todos los geacuteneros lite-rarios que florecieron a ambos lados del Atlaacutentico y que no solamente llaman la aten-cioacuten por su nuacutemero sino por la calidad de sus obras Algunas de ellas como dontildea Luisa de Padilla condesa de Aranda calificada por Serrano y Sanz como laquola maacutes notable de cuantas florecieron en Espantildea en el siglo XVIIraquo personificaraacuten a la perfeccioacuten a este tipo de mujeres Tambieacuten deberiacuteamos saber cuaacutentas seriacutean las mujeres que escribieron con pseudoacutenimos masculinos

La informacioacuten sobre las diferentes facetas de la vida femenil con que contamos no es abundante A pesar de todo podemos hacernos una idea maacutes clara de la verdadera situacioacuten de la mujer a traveacutes de una nueva interpretacioacuten de los textos tanto de los medievales como de las croacutenicas de los primeros antildeos del descubrimiento y conquista Algunos estudios relativamente recientes surgidos por el intereacutes general que suscita todo lo concerniente a la mujer han ayudado a considerar nuevas perspectivas La eru-dicioacuten moderna estaacute poniendo en tela de jucio los estereotipos tradicionales en cuanto a la pasividad y relevancia femeninas asiacute como al tradicional misogenismo que se atri-buye a la eacutepoca medieval Cada vez estaacute maacutes claro que la existencia de estas mujeres variaba considerablemente seguacuten la eacutepoca posicioacuten social o situacioacuten geograacutefica por lo que hacer valoraciones categoacutericas sobre laquola situacioacuten de la mujerraquo puede llevar a graves equivocaciones (Dillard 9) Es fundamental para comprender a la mujer espa-ntildeola que pasoacute al Nuevo Mundo tener en cuenta las enormes diferencias de todo tipo que existieron en la sociedad castellana y novomundista Un pintoresco ejemplo es el de laquolas tapadasraquo una usanza de origen aacuterabe que se pondriacutea de moda en Castilla poco despueacutes de la toma de Granada por los Reyes Catoacutelicos y que despueacutes pasariacutea al Peruacute Esta tradicioacuten ha perdurado en algunos pueblos de Espantildea hasta relativamente poco tiempo pueblos como Mojaacutecar (Almeriacutea) y Vejer de la Frontera (Caacutediz) son ejemplo de esta costumbre tambieacuten conocida como el de las laquocobijaacutesraquo

Tras la caiacuteda del reino musulmaacuten de Granada en 1492 la corona espa-ntildeola prohibioacute a las mujeres aacuterabes de Andaluciacutea vestir los velos islaacutemi-cos que cubriacutean sus rostros y ocultaban su identidad No era faacutecil des-arraigar esta costumbre tan ancestral y secular y el emperador Carlos asiacute como su hijo el rey Felipe II tuvieron que repetir la prohibicioacuten Cuando finalmente las moras fueron obligadas a abandonar sus velos y a adoptar el chal castellano comenzaron a utilizar la nueva prenda para cubrir sus rostros dejando al descubierto soacutelo uno de los ojos Esta nueva moda en el uso del chal tradicional nos asegura leoacuten Pi-nelo era extremadamente graciosa sensual y atractiva a causa de la belleza exoacutetica de los ojos de las moras Las mujeres cristianas de Granada Coacuterdoba y Sevilla imitaron pronto la nueva moda de llevar el chal y asiacute nacioacute la laquotapadaraquo hispana Desde Sevilla la nueva moda

150 JUAN FRANCISCO MAURA

fue a las colonias de ultramar y tomoacute raices especialmente en el Peruacute (Martiacuten 317-18)

En un reciente estudio sobre la educacioacuten de la mujer en la Ameacuterica virreinal apare-cen algunos ejemplos significativos de mujeres espantildeolas que consagraron gran parte de sus vidas a la tarea docente Dentro del proceso educativo de las espantildeolas que fueron a las Indias destaca el papel de dontildea Catalina de Bustamante Joseacute de Jesuacutes Vega y Ma-riacutea Luisa Caacuterdenas de Vega dicen en su obra Ameacuterica Virreinal La Educacioacuten de la mujer que esta mujer pocos antildeos despueacutes del descubrimiento del Nuevo Mundo se dedicoacute a trabajar en favor de los indios aunque por desgracia su nombre y sus hechos en la labor docente hayan sido ignorados por los historiadores modernos (Vega 12-13)

Son varias las veces que se nombra a Catalina de Bustamante en el citado estudio y varias las fuentes antiguas en que se recoge la presencia de tan distinguida laquomatrona muy honrada y de buen ejemploraquo de la que ya hablaba Zumaacuterraga y sobre la que se hizo un informe enviado a Carlos V describiendo sus actividades en la Nueva Espantildea firmado por cuatro de los misioneros maacutes conocidos de Meacutexico

El informe dice que los franciscanos de Texcoco acababan de cons-truir un nuevo monasterio y cedido el antiguo A una honrada y honesta y muy virtuosa matrona que se dice Catalina de Bustamante para que ende instruyese a las hijas de los sentildeores de la comarcala cual con el favor de Dios y limosnas que don Hernando [Corteacutes] les haciacutea para su sustentacioacuten [teniacutea en esa casa-hogar] hasta trescientas mujeres antes maacutes que menos (Vega 14)

Estas laquocasas-hogarraquo no estaban regentadas necesariamente por monjas sino por lo que llamaban laquobeatasraquo mujeres que sin estar estar sujetas a la autoridad eclesiaacutestica se dedicaban a un laquolucro honestoraquo Llamadas tambieacuten laquobeateriosraquo eran diferentes a los conventos de monjas y constituiacutean las primeras escuelas de la mujer en la Nueva Espa-ntildea (Vega 20-21) Fue gracias al ejemplo de mujeres como Catalina de Bustamante que dedicaron sus vidas a la educacioacuten de los indiacutegenas que existiesen otras continuando su ejemplo Motoliniacutea dice claramente que laquode ese primer encerramiento (el de Texcoco regentado por Catalina) salieron otras honestas y muy virtuosas duentildeas que ensentildeaban a las maacutes menudasraquo (Vega 23)

Pero dontildea Catalina de Bustamante pese a ser una singular mujer y la iniciadora de la educacioacuten de la mujer en Meacutexico no fue un caso aislado corresponde maacutes bien a un patroacuten al que se ajustaron muchas de las pioneras de la Nueva Espantildea que sembraron instituciones de educacioacuten de la mujer En 1530 unos antildeos maacutes tarde aparecioacute una de las grandes protectoras de la instruccioacuten femenina en Ameacuterica La emperatriz Isabel de Portugal (Vega 24)

Desde comienzos de la conquista fueron varios los centros docentes regentados por mujeres en los que la ensentildeanza no estaba impartida por monjas Una de las institucio-nes maacutes sobresalientes del sistema educativo fue el Colegio de Nintildeas que se establecioacute en la ciudad de Meacutexico a principios del siglo XVI con maestras que no eran monjas Estas seglares conocidas comunmente como laquomigasraquo eran las descendientes de las antiguas beatas Su ubicacioacuten permanente fue determinada en 1548 lugar que serviriacutea de escue-la ininterrumpidamente hasta 1862 cuando el edificio fue convertido en bodega (Vega 60) No se debe perder de vista que no soacutelo por el hecho de llevar una vida secular se

151ESPANtildeOLAS DE ULTRAMAR EN LA HISTORIA Y EN LA LITERATURA

gozaba de maacutes privilegios Era maacutes bien al contrario En las carreteras las mujeres segla-res no inspiraban el mismo respeto que las monjas que ademaacutes teniacutean contacto cons-tante con personas de los dos sexos no pertenecientes a la Iglesia (Arenal 297) Ademaacutes dentro de las murallas del convento desapareciacutean muchas de las barreras sociales que limitaban a la mujer de esta eacutepoca

La presencia femenina y la monarquiacutea

Pues iquestcoacutemo sabes tuacute preguntoacute don Quijote que los grandes llevan detraacutes de siacute a sus caballerizos Yo seacute lo direacute respondioacute Sancho Los antildeos pasados es-tuve un mes en la corte y alliacute vi que paseaacutendose un se-ntildeor muy pequentildeo que deciacutean que era muy grande un hombre le seguiacutea a caballo a todas las vueltas que daba que no pareciacutea que era su rabo Pregunteacute que coacutemo aquel hombre no se juntaba con el otro sino que siempre anda-ba tras deacutel Respondieacuterome que era su caballerizo y que era uso de grandes llevar tras siacute a los tales Desde enton-ces lo seacute tan bien que nunca se me ha olvidado (Cervan-tes Don Quijote)

Los monarcas espantildeoles fueron conscientes de que sin la presencia femenina difiacute-cilmente se podriacutea solidificar una conquista a todos los niveles La mayor parte de los virreyes y altos cargos trajeron a sus mujeres con ellos y en las ciudades principales de Hispano-Ameacuterica como la ciudad de Meacutexico Guatemala Lima o Potosiacute habiacutea mujeres que disfrutaban de una esmerada educacioacuten (gramaacutetica latiacuten poesiacutea historia muacutesica) Esto dariacutea origen a una elegante y hasta cierto punto sofisticada sociedad en la que las mujeres tomaron parte en asuntos maacutes importantes que los que sus homoacutelogas toma-ran en las colonias portuguesas laquoThere were brilliant vice-regal courts at Mexico City and Lima far exceeding anything that could be found in Portuguese or English America during the seventeenth centuryraquo (Boxer 39) Las estadiacutesticas con las que contamos hoy no soacutelo demuestran que las mujeres llegaron al Nuevo Mundo en respetables porcen-tajes sino que ademaacutes tuvieron una participacioacuten activa llegando a intervenir en algu-nos casos en las liacuteneas de vanguardia Resulta difiacutecil aproximarse al estado de aacutenimo de aquellas mujeres que vivieron en eacutepocas tan lejanas Para ello es necesario indagar en los documentos de la eacutepoca para lograr rescatar del pasado todos esos tesoros de la historia muchas veces tergiversados y manipulados con el fin de que sirvan a propoacutesi-tos actuales Es en los viejos manuscritos donde queda testimoniada su presencia tan rica en dolores tragedias y por queacute no en amores Fue la llegada de estas mujeres una brisa de esperanza y de ilusioacuten para aquellos que ya estaban en las tierras de ultramar y

152 JUAN FRANCISCO MAURA

veiacutean venir de su propia tierra aquello que maacutes antildeoraban amantes madres hermanas Un haacutelito de vida y poesiacutea que suavizaba las costumbres de estos rudos y romaacutenticos pioneros laquoporque para ser hombres de tales empresas algo de romaacutentico debioacute de existir en ellos y que es tan propio del espantildeol y abandonariacutean en brazos tan gentiles sus bruscos modales que habiacutean adquirido en aacutespero contacto en selvas y montantildeasraquo (Villafantildee 125)

Hoy sabemos que en la normativa oficial de la Espantildea del siglo XVI y XVII se favoreciacutea el paso de mujeres al Nuevo Mundo Afirmar lo contrario no solamente es falso sino que implica un desconocimiento total de los primeros dos siglos de la colonizacioacuten espantildeola La presencia de estas mujeres espantildeolas fue efectiva laquolas disposiciones al respecto demuestran claramente que se teniacutea especial intereacutes en su arraigo y que se tra-taba de defender su posicioacuten de mujeres casadas con conquistadores y colonizadoresraquo (Villafantildee 126) Los monarcas comprendiacutean que era praacutecticamente imposible que los hombres viviesen sin mujeres y que de ser asiacute era de esperar que se cometiesen abusos con las indias lo que incidiriacutea en la moral social y en el buen gobierno de la colonia Ademaacutes sin un asentamiento definitivo con hogares y familias difiacutecilmente se podriacutea llevar a cabo una presencia permanente en las nuevas colonias (Orsquo Sullivan-Beare 45)

Empezando por los Reyes Catoacutelicos la preocupacioacuten de que en las colonias se esta-bleciesen nuacutecleos que tuviesen como base la familia cristiana fue clara Las capitulacio-nes que a este efecto se hicieron entre los conquistadores y la Corona fueron nume-rosas La efectuada entre Rodrigo de Baacutestidas y Carlos V puede ser un buen ejemplo Fechada en Valladolid el 6 de noviembre de 1524 muestra el propoacutesito de Baacutestidas de establecer una colonia permanente en la desembocadura del riacuteo Magdalena en el terri-torio que hoy vendriacutea a corresponder a Colombia El documento firmado por el Empe-rador comienza asiacute

El Rey Por cuanto por parte de vos Rodrigo de Baacutestidas vecino de la ciudad de Santo Domingo de la Isla Espantildeola Me fueacute fecha relacioacuten que por servicio de la Catholica Reyna Mi Sentildeora e Nuestro os ofre-ceacuteis de poblar e poblariades la provincia e puerto de Santa Marta que en Castilla de Oro llamada la Tierra Firme e que la poblariades dentro de dos antildeos siguientes haciendo en ella un pueblo en que no menos haya en eacutel al presente cincuenta vezinos que los quince de ellos sean casados y tengan consigo a sus mujeres y que lo teniades fecho dentro de dos antildeos y de hoy en adelante lo maacutes que fuese posible asiacute de cris-tianos espantildeoles como de indios (Restrepo 1 30)

De igual manera el priacutencipe Felipe (futuro Felipe II) en las capitulaciones establecidas en 1547 con Juan de Sanabria para que eacuteste fuese como gobernador y capitaacuten general de la dicha provincia escribe lo siguiente laquoPrimeramente que seais obligado e os obligeis a llevar destos Reynos de Castilla a la dicha provincia del Rio de la Plata cien casados con sus mujeres e hijos para poblar la dicha provincia y con ellos llevareis a vuestra muger e hijos (CDI de Ameacuterica y Oceaniacutea 23 119)

En numerosas ocasiones se pone de manifiesto el apoyo de la monarquiacutea a la emigra-cioacuten femenina tantas que difiacutecilmente se podriacutean enumerar todos los casos Lo cierto es que la legislatura vigente favoreciacutea la emigracioacuten y traslado de mujeres con toda una se-

153ESPANtildeOLAS DE ULTRAMAR EN LA HISTORIA Y EN LA LITERATURA

rie de alicientes137 sobre todo si eacutestas estaban casadas pasaje para llevar a las familias franquicia de derecho para los artiacuteculos que portasen consigo favoritismo en cargos destinos y contrataciones a aquellos que pasasen con sus mujeres incluyendo ademaacutes de los castellanos y leoneses a suacutebditos de otras partes de la corona incluso genoveses y portugueses si estos veniacutean acompantildeados de sus consortes (Fernaacutendez Duro 15-16)

Incluso se llegoacute a imponer penas a aquellos hombres casados que no llevasen a sus mujeres con ellos a Indias en el teacutermino de un antildeo El mismo emperador en una ceacutedula otorgada al virrey de la Nueva Espantildea le recomendaba que laquoprocurase persuadir a ca-sarse a los solteros que estuviesen en edad y situacioacuten de hacerloraquo prometieacutendoles que al efectuar el matrimonio seriacutean preferidos en el reparto de indios En la isla de San Juan de Puerto Rico los cargos oficiales y oficios puacuteblicos debiacutean de ser desempentildeados por los casados en primer lugar En Meacutexico ocurrioacute lo mismo con los cargos de corregido-res (Konetzke laquoemigracioacutenraquo 140-41) Felipe II al igual que sus antecesores y sucesores reiteraraacute y justificaraacute los beneficios de los que seraacuten acreedores aquellos que tengan allaacute a sus mujeres laquoque los que han servido en los descubrimientos de las dichas Indias y tambieacuten los que ayudan a la poblacioacuten dellas que tienen allaacute sus mugeres sean preferi-dos en los aprouechamientos qualesquierraquo mandando que despueacutes de los conquistado-res se tuviera en cuenta para la laquoprovisioacuten de los corregimientosraquo a los colonos casados siempre que estuvieran capacitados para dichos cargos (Konetzke laquoemigracioacutenraquo 141)

Las disposiciones en favor del matrimonio son claras ya sea por medio de un favo-ritismo manifiesto como en los casos antes citados o mediante medidas de cohercioacuten para que esta poliacutetica se llevase a cabo Don Sebastiaacuten Ramiacuterez de Fuenleal obispo de Santo Domingo y presidente de la Audiencia de Meacutexico propuso que a aquellos enco-menderos que no estuviesen casados y que no hubiesen tomado parte en la conquista se les quitase los indios concedidos con la obligacioacuten de devolveacuterselos si en el plazo de un antildeo habiacutean contraiacutedo matrimonio (Konetzke laquoemigracioacutenraquo 142-43) Por supuesto hubo excepciones a estas reglas En algunos casos ni la mujer teniacutea especial intereacutes en vivir junto con su marido en las Ameacutericas ni el marido queriacutea ir a buscar a su mujer pasado el plazo de un antildeo En el presente documento y de forma excepcional las auto-ridades reales protegen a los conyuges para que puedan seguir viviendo separados en continentes diferentes

Nuestras justicias de la ysla de Cubagua e otras qualesquier de las nuestras Yndias yslas e tierra firme del mar oceacuteano e a cada uno e qualquier de vos a quieacuten esta mi ceacutedula fuese mostrada por parte de Alonso de Tapia nuestro veedor de la provincia de Paria me ha sido hecha relacioacuten que ha mucho tiempo que reside en esas partes donde nos ha servido en lo que se ha ofrecido e que agora vos otros le apre-miaacuteis a que venga o embiacutee a estos Reinos por su muger lo cual no puede al presente hazer a causa de no ter posibilidad para ello a mi me ha suplicado vos mandase que no le compeliacuteesedes ny apremiaacutesedes a que viniese o enviase por la dicha su muger y dieacutesedes por libres los fiadores que tenyades para que dentro de un antildeo embiariacutea o verniacutea por

137 Reales Ceacutedulas de los antildeos 1502 y 1503 Academia de la Historia Coleccioacuten Muntildeoz tomo 75 fols 209 y 220 citado por Fernaacutendez Duro 15

154 JUAN FRANCISCO MAURA

ella o como la mi merced fuese lo cual visto por los de nuestro consejo juntamente con una peticioacuten presentada por dontildea Mariacutea Gudiel muger del dicho Alonso de Tapia por la cual nos suplica lo mismo que acor-dado que debiacutea mandar esta mi ceacutedula para vos por la qual vos mando que no compelaacuteis ni apremieacuteis al dicho Alonso de Tapia a que venga ni enviacutee a estos reinos por la dicha su muger si no fuere a que la pro-vea de lo que fuere necesario para su mantenimiento y deys por libres quales quier fianzas que sobre ello haya dado e no fagades ende al por alguna manera Firmado en la villa de Valladolid a VII diacuteas del mes de febrero de mil e quinientos e treinta y siete antildeos yo el licenciado Con-de de Samano y sentildealada del cardenal Beltraacuten y Carbajal [Aparte en letra pequentildea] Este diacutea se despachoacute una provisioacuten por la cuaacutel su Mag hizo merced a Alonso de Tapia de la veedoriacutea de la provincia de Paria por muerte de Garciacutea de Aguilar con las clausulas ordinarias y con el mismo salario que teniacutea Aguilar Firmado del emperador y de Beltraacuten y Bernal y Velaacutezquez El Rey (Registro de disposiciones Riacuteo Marantildeoacuten AGI Indiferente General Legajo 416 libro 2 Fols 94v y 95r)

El punto maacutes interesante a destacar de todas estas disposiciones oficiales en cuanto a la emigracioacuten femenina al Nuevo Mundo no es otro que la libertad que se da a la mujer de decidir si quiere o no casada o sin casar trasladarse al nuevo continente no como una imposicioacuten sino como un precepto laquoel espiacuteritu de las disposiciones en el sentido de asegurar la vida marital de los casados significa que la mujer que su marido invita a pa-sar a las Indias puede negarseraquo (Villafantildee 127) Habriacutea que ver las opciones laquorealesraquo ade-maacutes de las legales y econoacutemicas que le quedaban a la mujer si tomaba esta decisioacuten

El saber la libertad de eleccioacuten que estas mujeres teniacutean de antemano antes de aden-trarse en las interminables penalidades y aventuras que los viajes de la navegacioacuten tran-soceaacutenica suponiacutean hace que sus hechos y esfuerzos cobren auacuten maacutes relieve En nume-rosas ocasiones estas mujeres cruzaron el oceacuteano una y maacutes veces sin otro motivo que el de defender los derechos e intereses de los suyos Lo que resulta maacutes valioso de todo esto es que lo hicieran por propia iniciativa arriesgando sus vidas para que se hiciese justicia y para que no les faltase lo necesario a aquellos que estaban en la otra orilla Las autoridades vigentes conocedoras de los vaciacuteos legales existentes en las nuevas colo-nias se apresuraron a poner en vigor aquellas normas que redundaran en el beneficio de los menos favorecidos por las circunstancias La institucioacuten del matrimonio cuya trans-cendencia es fundamental en la vida juriacutedica y social de la mujer tuvo que ser legislada en Ameacuterica con una serie de nuevas disposiciones agregados modificaciones y aclara-ciones Asiacute pues la legislacioacuten de base espantildeola tuvo que sufrir en tierras americanas esta serie de cambios por motivos poliacuteticos y sociales (Villafantildee 126)

Para hacer un sumario de lo dispuesto hasta el siglo XVI en cuanto a la legislacioacuten de las mujeres que teniacutean familia o intereses en Indias merece la pena mencionar que existieron una serie de disposiciones que protegiacutean a las mujeres para que eacutestas no se viesen abandonadas por sus maridos En un epiacutegrafe de la Recopilacioacuten de 1680 (libro VII tiacutetulo 3) se deja ver claramente la preocupacioacuten de las autoridades en este asunto laquoDe los casados en Espantildea e Indias que estaacuten ausentes de sus mujeres y esposasraquo (Vi-llafantildee 126-27)

155ESPANtildeOLAS DE ULTRAMAR EN LA HISTORIA Y EN LA LITERATURA

La lista de disposiciones se hace interminable En los reinados de Fernando el Catoacute-lico Carlos V Felipe II Felipe III o incluso Carlos II la insistencia es constante La ra-zoacuten de esta insistencia seriacutea bastante obvia dado que con un oceacuteano por medio seriacutean muchos los que se aprovechasen de llevar una doble vida marital sin el estricto control y vigilancia de sus mujeres que se encontraban en la peniacutensula La ley XXVII libro IX tiacutetulo XXVI determina laquoDeclaramos por personas prohibidas para embarcarse y pasar a las Indias todos los casados y desposados en estos reinos lsquosino llevaren con ellos sus mujeresrsquo aunque sean virreyes oidores gobernadores o nos fuesen a servir en cual-quier cargo y oficios de Guerra Justicia y Hacienda porque es nuestra voluntad que todos los susodichos lleven a sus mujeresraquo (Villafantildee 127) laquoLos eclesiaacutesticos eran los en-cargados de dar cuenta a los tribunales competentes de aquellos que estando casados permaneciacutean en Indias sin sus mujeres Son reiteradas las disposiciones de Fernando el Catoacutelico en este sentidoraquo138 En 1514 el rey don Fernando ordena en una provisioacuten para la isla Espantildeola laquodoy licencia eacute facultad aacute cualquier persona naturales de estos Reynos para libremente se puedan casar con mujeres naturales de esa dicha ysla sin tener que incurrir por ello en pena algunaraquo (Villafantildee 129)

No se debe olvidar tampoco a aquellas mujeres que decidieron pasar a las laquonuevas tierrasraquo solteras Estas mujeres tambieacuten tuvieron un papel importante en el desarrollo de las nuevas colonias Los organismos espantildeoles del momento como los mandatarios indianos y todos los cronistas no dejaron pasar desapercibida la importancia social de estas mujeres en la poliacutetica de poblamiento laquo[E]s cierto que los pueblos de Indias nuevamente poblados no se tienen por fijos o estables ni permanentes hasta tanto que mujeres espantildeolas entren en ellos y los encomenderos y conquistadores se casen por muchas causas y respetos buenos y saludables que para ello hayraquo (Villafantildee 126-27)

Si la intencioacuten era la de una presencia permanente en las tierras americanas la mujer soltera que pasase a ellas siempre seriacutea un motivo maacutes para el colono o conquistador de continuar en el mismo suelo Se podriacutea empezar una familia si asiacute se quisiese sin tener que pensar en volver a la metroacutepoli ya fuese a disfrutar de los bienes adquiridos o a laquobuscarraquo una esposa El problema aparecioacute cuando se produjo un exceso de mujeres solteras lo que de alguna manera alteroacute la estructura social existente ya que no habiacutea muchas opciones para ellas aparte del matrimonio o el convento

En consideracioacuten a que la experiencia habiacutea demostrado que un exce-sivo nuacutemero de mujeres ejerciacutea perniciosa influencia sobre la moral y las costumbres se suplicaba al rey no otorgase a aquellas tantas auto-rizaciones para emigrar al Peruacute La ciudad de la Plata fundada en 1538 emite en 1577 un informe en el que se expone la urgente necesidad de que se funde un convento de monjas pues en el territorio de las Au-diencias de Los Charcas existiacutea un gran nuacutemero de muchachas que no pudieacutendose casar se hallaban en gran peligro de perderse (Konetzke laquoemigracioacutenraquo 149)

138 Solorzano Pereira Juan de Libro Primero de la Recopilacioacuten de las Ceacutedulas Reales Cartas y Provisiones y Or-denanzas Reales Noticia preliminar de Ricardo Levenne Universidad de Buenos Aires Facultad de Derecho Y Ciencias Sociales Pub del Instituto de Historia del Derecho Argentino Coleccioacuten de Textos y Documentos para la Historia del Derecho Argentino t V Buenos Aires Imp de la Universidad de Buenos Aires 1945 (Li-bro I Ley 10 laquoQue los Espantildeoles puedan casar con Indias y al contrario a su voluntadraquo t2 p 138 citado en Villafantildee 129

156 JUAN FRANCISCO MAURA

Entristece ver coacutemo se manejan las cifras de estas mujeres como si de ganado o de bienes suntuarios se tratase Por otra parte existieron irregularidades como la de pobla-doras espantildeolas que vivieron amancebadas con hombres que ya estaban casados en la peniacutensula Normalmente esto ocurriacutea cuando la estancia del conquistador se prolonga-ba maacutes de lo debido en lugares donde habiacutea pocas espantildeolas Muchas veces nacieron hijos de estas uniones que hicieron auacuten maacutes difiacutecil la situacioacuten para las mujeres que esperaban en Espantildea a un marido que ya no teniacutea ningunas intenciones de volver En los juicios de residencia los documentos acostumbran a citar estos casos ya que era parte de su obligacioacuten castigar las irregularidades extramatrimoniales y salvaguardar las buenas costumbres familiares que con tanto intereacutes se deseaba mantener laquoUn ejemplo nos lo da la isla de Cuba donde en 1532 viven con hombres casados Olalla Hernaacuten-dez Santillana Aranda lsquola Cordobesarsquo Catalina de Leoacuten Catalina Saacutenchez Francisca Hernaacutendez Mayor de Azebedo Juana de Valeros y lsquouna mujer que estaba en casa de Ayalarsquoraquo (Borges 416)

Estos casos no fueron aislados y mucho menos en Cuba centro neuraacutelgico de todo el movimiento de ida y vuelta entre la metroacutepoli y el Nuevo Mundo Estas ocho acusa-ciones por lo tanto no tienen porqueacute considerarse extraordinarias y menos en el lugar maacutes cosmopolita de las Indias en esos momentos al que llegaban flotas a cada momen-to Al parecer existieron casos parecidos en el Riacuteo de la Plata Peruacute y Nueva Espantildea (Ratcliffe 347) El margen legal para que estas mujeres viviesen como quisiesen estuvo limitado por una moral que veiacutea uacutenicamente en el matrimonio o el convento una salida laquovaacutelidaraquo para que fueran aceptadas socialmente Los hombres en iguales circunstan-cias fueron juzgados por una laquomoralraquo mucho maacutes permisiva

La mujer y el cuerpo eclesiaacutestico

Pues iquestquieacuten diablos os traiacutedo aquiacute dijo don Quijote siendo hombre de la iglesia iquestQuieacuten sentildeor replicoacute el caiacutedo laquomi desventuraraquo Pues otra mayor os amenaza dijo don Quijote sino me satisfaceacuteis a todo cuanto primero os pregunteacute (Cervantes Don Quijote )

Otro factor a tener en cuenta en un anaacutelisis sobre la presencia de la mujer en el Nuevo Mundo es el que tiene que ver con la institucioacuten maacutes importante de las que llegaron desde Europa la iglesia catoacutelica Sin aacutenimo de criticar a tan compleja institucioacuten res-ponsable de gran parte de los aconteceres en el Nuevo Mundo vale la pena analizar algunas singularidades Muchos de sus miembros fueron grandes ejemplos de valor e inteligencia a la hora de tratar los maacutes variados y escabrosos asuntos con los que se encontraron los cristianos en la otra orilla durante este periacuteodo Se debe resaltar tam-

157ESPANtildeOLAS DE ULTRAMAR EN LA HISTORIA Y EN LA LITERATURA

bieacuten su caraacutecter medieval en la manera de hacer apostolado y de entender y tratar a los potenciales cristianos Si se tienen en cuenta los privilegios y prerrogativas que algunas de las altas jerarquiacuteas eclesiaacutesticas tuvieron no seriacutea superfluo estimar que un respeta-ble porcentaje de la poblacioacuten de origen laquodudosoraquo muy bien podiacutea venir de la misma iglesia Fueron muchas las viacutectimas y muchas las familias divididas por un padre laquoinvi-sibleraquo Gran parte de los hijos o laquosobrinosraquo de estos sacerdotes pasaron a ocupar cargos similares incluyendo los privilegios que estos cargos llevaban consigo como si se trata-se de cualquier otro oficio gremial transmitido generacionalmente regla tan comuacuten en la Europa medieval Todaviacutea a finales del siglo XIII en Espantildea los derechos de los hijos y nietos de los sacerdotes estaban protegidos por la ley sin que hubiesen podido ser erradicados por las reformas gregorianas (Ratcliffe 347)139

Las letras espantildeolas ya se haciacutean eco de estos lances amorosos entre representantes de la Iglesia y ciertas damas del lugar desde los tiempos del poeta riojano Gonzalo de Berceo En su obra maacutes conocida Los milagros de Nuestra Sentildeora Berceo describe con un realismo ingenuo y sencillo relatos de humor y de humanismo sobre aquellos hombres de carne y hueso que eran perdonados por la intercesioacuten de la Virgen Mariacutea Juan Ruiz por su lado haraacute de su Libro de buen amor la obra maacutes representativa en este sentido Seriacutea prolijo recordar la actuacioacuten de la Iglesia durante diversos periacuteodos de la Edad Media no soacutelo en Espantildea sino en toda Europa En la Espantildea musulmana del siglo XII concretamente en Sevilla el comportamiento de los representantes de la iglesia cristia-na (mozaacuterabe) en territorio islaacutemico es duramente criticado por el sevillano Ibn Abdun Este precioso documento muestra el estricto control y falta de confianza que existiacutea sobre la mujer prohibieacutendolas que entrasen en las laquoabominablesraquo iglesias cristianas

porque los cleacuterigos [cristianos] son libertinos fornicadores y sodomi-tas Asimismo debe prohibirse a las mujeres francas que entren en la iglesia maacutes que en diacuteas de funcioacuten o fiesta porque alliacute comen beben y fornican con los cleacuterigos y no hay uno de ellos que no tenga dos o maacutes de estas mujeres con que acostarse Han tomado esta costumbre por haber declarado iliacutecito lo liacutecito y viceversa Convendriacutea pues mandar a los cleacuterigos que se casasen como ocurre en Oriente y que si quie-ren lo hagan (Leacutevi-Provenccedilal 150)

Pese a existir una convivencia paciacutefica durante gran parte de la Edad Media entre los tres credos monoteiacutestas de Espantildea (cristianos musulmanes y judiacuteos) esto no suponiacutea que no existiese desprecio y desconfianza entre estos grupos religiosos Dice Abdun resaltando el peligro que suponiacutea que una mujer entrase en casa de un cleacuterigo cristiano de vida ceacutelibe

No debe tolerarse que haya mujer sea vieja o no en casa de un cleacuterigo mientras eacuteste rehuacutese casarse Obliacutegueseles ademaacutes a circuncidarse co-mo les obligoacute al-Mutadid pues si a lo que dicen siguen el ejemplo de Jesuacutes (iexclDios les bendiga y salve) Jesuacutes se circuncidoacute y precisamente ellos que han abandonado esta praacutectica tienen una fiesta que celebran solemnemente el diacutea de su circuncisioacuten (Leacutevi-Provenccedilal 150-151)

139 Valdriacutea la pena ver si han cambiado mucho las cosas desde hace quinientos antildeos a esta parte o si in-cluso la iglesia moderna ha retrocedido en tolerancia en cuanto a las relaciones sexuales de los representantes de la Iglesia

158 JUAN FRANCISCO MAURA

El historiador argentino Germaacuten Arciniegas recoge un pasaje ilustrativo de lo men-cionado anteriormente pero trasladado al ambiente de la colonia diciendo que incluso en poblaciones pequentildeas como Santa Fe con poco maacutes de un convento y una ermita la fragilidad de la carne enredaba a frailes soldados y virreyes por igual laquoEl buen So-liacutes que murioacute en olor de santidad con la cabeza reclinada sobre un par de ladrillos y en saya de franciscano cruzaba en las noches el solar de su palacio para ir a besar a la Marichuelaraquo (118-19)

Arciniegas recoge tambieacuten un suceso aparecido en el diario de Lima en 1667 que no tuvo que ser extraordinario durante los primeros antildeos de la colonia laquoEl fraile carmelita mdashGrande hereje y siendo sacerdote deciacutea misa gran perro lujurioso deshonesto que relatando sus maldades dijo que en cierta ciudad habiacutea conocido carnalmente a maacutes de trescientas y sesenta mujeres y en un convento de monjas habiacutea cometido muchos sacrilegios Este lo trujeron preso de Buenos Aires por Chileraquo (119)

Las controversias de la iglesia moderna sobre las relaciones que los eclesiaacutesticos de-ben tener con el sexo femenino parece que no han encontrado todaviacutea respuesta Sigue existiendo miedo y recelo a que la mujer comparta no soacutelo poder en la jerarquiacutea de la iglesiacutea sino en la vida privada de los miembros de la institucioacuten En la Nueva Espantildea el primer obispo de Meacutexico Juan de Zumaacuterraga viendo en la mujer un ser de tentacioacuten irresistible prohibioacute terminantemente la presencia de eacutestas en su casa Ni siquiera para su limpieza y aseo El franciscano Juan de Torquemada se refiere a este comportamien-to como una de las virtudes del popular obispo

Fue este benditiacutesimo prelado muy amigo de la virtud y de virtuosos y aceacuterrimo reprehendedor de vicios y viciosos y tan enemigo de la ociosidad que no permitiriacutea que alguno de su casa estuviese ocioso fue amiciacutesimo de la limpieza por lo cual jamaacutes consintioacute que mujer alguna entrase en su casa aunque fuese necesaria al servicio de ella ni nunca consintioacute que por alguna ocasioacuten subiese mujer a lo alto y aposentos de ella antes lo teniacutea todo cerrado como un monasterio porque sabiacutea (como quien tambieacuten sabiacutea) que la ocasioacuten suele derribar los maacutes fuertes y robustos corazones (450 lib 20 cap 31)

No fueron uacutenicamente miembros de la iglesia catoacutelica los que valoraron la lucha con-tra la tentacioacuten siguiendo al pie de la letra el crudeliacutesimo refraacuten laquoentre santa y santo pared de cal y cantoraquo Se tienen algunas noticias de la vida social de los primeros tiem-pos de la colonia En estos documentos se puede observar coacutemo no distaban mucho las oacuterdenes que se dictaban en la metroacutepoli y las que se llevaban a cabo en la Nueva Espantildea La vida social tanto de damas como de algunos miembros de la iglesia de las colonias era maacutes laquorelajadaraquo de lo que las normas permitiacutean Gracias a la informacioacuten ofrecida por Manuel Romero de Terreros disponemos de los nombres de las primeras virreinas

Las esposas de los primeros cinco Virreyes Don Antonio de Mendoza Don Luis de Velasco Don Gastoacuten de Peralta Don Martiacuten Enriacutequez de Almanza y Don Lorenzo Suaacuterez de Mendoza Conde de la Coruntildea fueron respectivamente Dontildea Caterina de Vargas Dontildea Ana de Cas-tilla y Mendoza hija de Don Diego de Castilla Sentildeor de Gor y Caba-

159ESPANtildeOLAS DE ULTRAMAR EN LA HISTORIA Y EN LA LITERATURA

llerizo de Carlos V Dontildea Leonor de Vieo Dontildea Mariacutea Manrique hija del Marqueacutes de Aguilar y Dontildea Catalina de la Cerda hija del segundo Duque de Medinaceli (Romero 2)

Existen noticias concretas de la seacuteptima virreina de la Nueva Espantildea (1586) dontildea Blanca de Velasco marquesa de Villamanrique En ellas destaca lo anteriormente men-cionado sobre la falta de tolerancia existente en aquellos tiempos difiacutecilmente com-prensible si no fuera por fragmentos esporaacutedicos conservados sobre la vida colonial en la Nueva Espantildea En la siguiente Relacioacuten hecha por autores anoacutenimos sobre la visita que hizo Fray Alonso Ponce Comisario General de la Orden Seraacutefica a las provincias de la Nueva Espantildea se mencionan las eneacutergicas medidas que con los miembros de su orden en su opinioacuten de moral laquomuy relajadaraquo tomoacute este religioso Tambieacuten aparecen mencionadas sus relaciones con la Virreina

Captoacutese ademaacutes la enemistad del gobernante y de la Virreina Dontildea Blanca de Velasco hija del cuarto Conde de Nieva sentildeora seguacuten pare-ce de conducta ligera y caraacutecter maacutes que dominante laquoPor este mismo tiempo (septiembre de 1586) fueron el Virey y la Vireyna a holgarse y recrearse en la cibdad de Xochimilco Posoacute con toda su casa dentro de nuestro convento en un dormitorio deacutel y detuacutevose alliacute siete u ocho diacuteas en que los indios les hicieron grandes fiestas aunque les costaron caras porque en una dellas murieron dos o tres dellos con un tiro que se disparoacute y reventoacute y al principal indio de aquella cibdad hirieron muy malraquo (Romero 3-4)

A pesar del riacutegido control eclesiaacutestico y civil que habiacutea en la Nueva Espantildea existieron tambieacuten pareacutentesis en los que incluso miembros de la iglesia y mujeres mdashhumanos al fin y al cabomdash pudieron disfrutar de algunos momentos de regocijo y alegriacutea Con-tinuando con la cita anterior el mismo autor se queja del laquoexcesoraquo de libertad en los frailes que se suponiacutea que teniacutean que profesar una extremada pobreza y no digamos castidad En primer lugar se describen pormenorizadamente la abundancia en el tipo y cantidad de comida de toda clase dulces y vino que se consumieron con largueza y generosidad durante aquellas fiestas Pero lo que maacutes indigna al autor (o autores) fue que llegasen a entrar mujeres en el convento

y aunque todo esto es malo delante de Dios y delante de los hom-bres lo que maacutes mal parecioacute y de que todo el mundo tuvo que mur-murar fueacute la demasiada libertad rotura y disolucioacuten que hubo en en-trar y estar muy de propoacutesito mujeres no soacutelo la Vireyna y las suyas sino otras muchas dentro del dicho convento y andar por las celdas como si fuese cosa profana y como si no hubiera breve apostoacutelico que soacute graves penas y censuras prohibe estas entradas y como si a los frai-les no los comprendiera el dicho breve por admitirlas y no estuviera asiacute declarado y mandado por nuestros estatutos generales de Toledo (Romero 4-5)

La preocupacioacuten por las laquotentaciones de la carneraquo fuera del matrimonio siempre es-tuvo en la mente de los religiosos espantildeoles asiacute como de otras nacionalidades y reli-

160 JUAN FRANCISCO MAURA

giones que intentaban vanamente erradicar algo tan intriacutenseco al ser humano como a cualquier otra especie animal Esta preocupacioacuten se acentuoacute mucho maacutes en el Nuevo Mundo donde muchas sociedades tribales no veiacutean a la mujer como parte integrante de su propiedad privada La razoacuten es obviamente socioloacutegica y ha existido desde el principio de los tiempos en las civilizaciones maacutes primitivas laquoNo desearaacutes a la mujer del proacutejimoraquo El quebrantar este precepto equivaldriacutea a desestabilizar desde su base a la sociedad judeo-cristiana fundamentada en la familia Las penas aplicadas en estas transgresiones seraacuten lo suficientemente severas como para marginar socialmente mdashen el mejor de los casosmdash a aquellos que las pongan en praacutectica Siendo la mujer la encar-gada por la naturaleza de trasmitir la descendencia de la especie su libertad sexual se veraacute limitada por el peligro de quedar embarazada cada vez que ignore tal elemental precepto140

Primeras escritoras del Nuevo Mundo

Contra cuerdos y contra locos estaacute obligado cualquier caballero andante a volver por la honra de las mujeres cualesquiera que sean Cuanto maacutes por las reinas de tan alta guisa y pro como fue la reina Madaacutesima a quien yo tengo particular aficioacuten por sus buenas partes porque fuera de haber sido fermosa ademaacutes fue muy prudente y muy sufrida en sus calamidades que las tuvo muchas (Cervantes Don Quijote)

Fueron varias las escritoras que durante los siglos XVI y XVII tuvieron una relacioacuten di-recta o indirecta con el Nuevo Mundo Muchas de ellas eligieron la vida monaacutestica mdashen algunos casos como refugio huyendo de sus maridosmdash uacutenica salida en una estructura social en donde no eran muchas las opciones especialmente en una eacutepoca donde el fac-tor religioso pesaba casi tanto como el econoacutemico pero sobre todo para dedicarse a una vida espiritual difiacutecilmente alcanzable en otras circunstancias Mariloacute Vigil apunta que las monjas que lo eran por su propia voluntad ademaacutes de tener inquietudes religiosas tambieacuten las teniacutean intelectuales como es el caso de la escritora miacutestica espantildeola Santa Teresa de Jesuacutes (1515-1582) que ademaacutes de tener una de las vidas maacutes interesantes que se conozcan supo sacar tiempo para escribir las maacutes bellas manifestaciones de la poesiacutea liacuterica y sobre todo de la prosa castellana (Vigil 237-38) Cada una de estas mujeres de-dicadas a la vida literaria y espiritual de su tiempo se merece muchiacutesimo maacutes espacio del que se les pueda ofrecer en estas pocas liacuteneas No obstante con estas pasajeras men-

140 Aunque afortunadamente las cosas han cambiado para la mujer no se debe dejar de mencionar la can-tidad de abusos sexuales de la que es viacutectima en la sociedad moderna

161ESPANtildeOLAS DE ULTRAMAR EN LA HISTORIA Y EN LA LITERATURA

ciones se espera al menos incluirlas y poder despertar el suficiente intereacutes para que sus vidas y sus obras no sigan sumergidas en las simas del olvido Para que estas mujeres de la iglesia pudiesen satisfacer su curiosidad cognoscitiva era necesario romper todas aquellas barreras que supusiesen un estorbo o una restriccioacuten a la hora de investigar consultar o hablar con cualquier persona religiosa de cualquier orden o secular ya fue-se obispo o cleacuterigo Las posiciones intelectuales entre las diferentes oacuterdenes religiosas fueron muy dispares como bien es sabido No eran iguales los planteamientos teoloacute-gicos de los dominicos que los de los franciscanos o los de los carmelitas que los de los agustinos o jesuitas Era necesario por lo tanto tener acceso a estas fuentes de informa-cioacuten para poder constrastar las diferencias y hacer valoraciones propias (Vigil 237-38) El escritor espantildeol Caro Baroja destaca el caraacutecter enciclopeacutedico del catolicismo donde se han integrado corrientes y posturas muy dispares que a traveacutes del diaacutelogo daban cierto espacio al creyente con maacutes curiosidad intelectual para que este pudiese compa-rar y valorar las diferentes opciones que se le ofreciacutean (Vigil 237-38)

Varias de estas mujeres intelectuales fueron hijas de conquistadores que aunque na-cidas en suelo americano seguiacutean expresaacutendose en la lengua de sus padres con no me-nos fuerza que sus contemporaacuteneas peninsulares Es cierto que existieron numerosas escritoras en el Nuevo Mundo durante el siglo XVIII algunas dedicadas incluso al estudio de las matemaacuteticas como la mexicana Dontildea Francisca Gonzaga y Castillo Pero para limitar el presente trabajo a los siglos XVI y XVII uacutenicamente se incluiraacuten ejemplos de estos dos siglos

La peruana Josefa de Alarcoacuten publicoacute en 1648 unas liras dedicadas a las Exequias del Priacutencipe Baltasar Carlos

Cifro en capilla breveEl tribunal de la Magestad maacutes graveEn fe de lo que debeA Carlos que en dos mundos no cabe141

El caso de Sor Jeroacutenima de la Asuncioacuten es muy interesante una mujer que tuvo la oportunidad de viajar a Meacutexico y posteriormente a las Filipinas para cumplir con las mi-siones que le habiacutean sido encomendadas por su orden Nacida en Toledo en 1555 en el seno de una noble y acaudalada familia estuvo destinada a recorrer el mundo ofrecien-do sus servicios a todos los necesitados distinguieacutendose por su ardiente caridad laquovien-do que los galeotes eran tratados con dureza excesiva sobre todo cuando los llevaban de un pueblo a otro procuroacute aliviar las penas de aquellos desgraciados y lo consiguioacute en parteraquo (Serrano y Sanz 268 65) Hija del licenciado e ilustre jurista Pedro Garciacutea Yaacute-ntildeez y de dontildea Catalina de la Fuente ingresoacute contra su voluntad en el monasterio de las Clarisas de Santa Isabel de los Reyes (Toledo) el 5 de agosto de 1570 (Trevintildeo 46) hay que decir que eacutesta no seraacute la uacutenica voluntad contra la que tuvo que luchar

Sor Jeroacutenima se embarcoacute para Meacutexico y de alliacute partioacute hacia Manila junto con siete compantildeeras en el famoso laquoGaleoacuten de Manilaraquo que saliacutea anualmente del puerto mexi-cano de Acapulco Su viaje a las Filipinas duroacute un antildeo y tres meses desde su salida de Espantildea tiempo en el que demostroacute un gran valor y determinacioacuten por el soacutelo hecho de

141 Manuel Serrano y Sanz Apuntes para una biblioteca de escritoras espantildeolas desde el antildeo 1401 al 1833 vols 268 269 270 271 Biblioteca de Autores Espantildeoles (Madrid Atlas 1975) 268 19

162 JUAN FRANCISCO MAURA

embarcarse en tan precarias naves Fue la primera misionera de Oceaniacutea muriendo en Manila en 1621 Alliacute fundoacute el monasterio de Santa Clara que perviviriacutea hasta ser bom-bardeado en la Segunda Guerra Mundial (Trevintildeo 47) Escribioacute su Vida donde trata de la fundacioacuten del convento y de todas las tribulaciones mdashllegoacute a ser excomulgadamdash y satisfacciones que una vida dedicada a una causa justa proporciona Tambieacuten escribioacute una obra de caraacutecter filosoacutefico-teoloacutegico titulada Carta de marear en el mar del mundo nombre alegoacuterico que da cuenta de la enorme distancia recorrida a traveacutes del laquomar del espiacuterituraquo por sor Jeroacutenima He aquiacute algunos de sus versos de caraacutecter religioso

Vuestra soy para vos naciacuteiquestQueacute mandaacuteis hacer de miacute Inaccesible grandezaEterna Sabiduriacuteay bondad del alma miacuteaDios un ser poder y Altezamirad la suma pobrezade eacutesta que se ofrece aquiacuteiquestQueacute mandaacuteis hacer de miacute (Serrano y Sanz 268 66)

Ya en Meacutexico tenemos otro ejemplo de una mujer dedicada por completo a Dios y al estudio y composicioacuten de obras de caraacutecter teoloacutegico Dontildea Ana Mariacutea del Costa-do de Cristo nacida en la ciudad de Tlaxcala hacia el antildeo 1650 Tomoacute la orden de San Francisco para consagrarse a las labores de su orden y a la escritura Se dice que con los escritos de Dontildea Ana Mariacutea se podriacutean formar veinte tomos (Serrano y Sanz 268 282) Estas son algunas de sus obras Vida y muerte de Jesucristo Nuestro Sentildeor Vida del Seraacutefico Padre San Francisco de Asiacutes Vida de la iacutenclita Virgen Santa Clara Vida del sutiliacutesimo doctor Juan Duns Escoto

Pero no todas las monjas tuvieron vidas tan dedicadas al estudio y la oracioacuten Loacutegica-mente entre un nuacutemero tan grande de mujeres existioacute de todo y seriacutea un error pensar que todos los conventos femeninos estaban integrados por laquocaacutendidas palomasraquo Una monja en el siglo XVI y XVII teniacutea mucha maacutes fuerza que una mujer ordinaria ya que actuaban en grupo y la entrada a los recintos donde viviacutean estaba permitida solo a mu-jeres Esta situacioacuten las haciacutea mucho maacutes fuertes a todos los niveles que una mujer sola protegida uacutenicamente por su familia laquoLas monjas durante los siglos XVI y XVII lucharon por eludir la clausura y por zafarse del control que los frailes de las secciones masculi-nas de sus congregaciones ejerciacutean sobre ellasraquo (Vigil 230) Soacutelo un antildeo maacutes tarde que dontildea Ana Mariacutea del Costado de Cristo en 1651 y a 12 leguas de Meacutexico nacioacute la sin par Sor Juana Ineacutes de la Cruz hija de don Pedro Manuel de Asbaje natural de Vergara (Vizcaya) y de Dontildea Isabel Ramiacuterez de Santillana hija de espantildeoles (Serrano y Sanz 268 289) Por ser sin lugar a dudas la poeta maacutes importante de su tiempo y probable-mente la maacutes conocida del mundo hispano no profundizaremos en ella Su obra es un canto a la inteligencia y el exponente maacutes destacado de la literatura barroca americana tanto en prosa como en verso Destacareacute simplemente que Sor Juana Ineacutes pese a vivir en un sociedad donde no eran excesivas las libertades concedidas a las mujeres tuvo el caraacutecter y la determinacioacuten de dejarnos las maacutes bellas poesiacuteas amorosas que si bien estuvieron enmarcadas en un ambiente religioso como era de esperar por su condicioacuten

163ESPANtildeOLAS DE ULTRAMAR EN LA HISTORIA Y EN LA LITERATURA

pudieron transcender como unas de las maacutes bellas manifestaciones literarias que hoy en diacutea se conservan Fue su agudeza mental sensibilidad y cultura tal que no fueron suficientes los soacutelidos muros del convento para contener el genio de tan extraordinaria mujer Recordemos sus conocidiacutesimos versos en defensa de las mujeres

Hombres necios que acusaacuteisa la mujer sin razoacutensin ver que sois la ocasioacutende lo mismo que culpaacuteis142

Las metaacuteforas y la delicadeza que emplea en rebatir a su obispo en su laquoRespuesta a sor Filotea de la Cruzraquo no son solamente el epiacutetome del feminismo de su tiempo sino una de las maacutes brillantes manifestaciones del barroco hispano Poesiacutea teatro ensayo y un conocimiento extraordinario de las ciencias claacutesicas de su tiempo hacen de esta mujer un ejemplo extraordinario de las letras universales Ya son cientos los artiacuteculos y libros que se han escrito sobre Sor Juana y no dejan de aparecer tesis doctorales sobre los maacutes diversos temas conectados con la citada autora143 Como nos dice Stephanie Merrim en su documentada obra Early Modern Womenrsquos Writing and Sor Juana Ineacutes de la Cruz

She wrote and published on secular themes as atypical for a nun as human love Her remarkably extensive writings essayed and reenacted most of the (male) poetic dramatic theological and even philosophi-cal discourses of her times in the metropolis making her works a com-pendium of baroque culture in its diversity and syncretism Sor Juana self-creation as a learned women effectively toppled many of the walls in which she was materially enclosed and positioned her within the dynamic world of early modern European culture (xii)

No se debe dejar de mencionar a otras escritoras novohispanas de la eacutepoca que aun-que no fueron tan proliacuteficas y relevantes como Juana Ineacutes de la Cruz dejaron testimo-nio de algunos acontecimientos que tienen intereacutes socioloacutegico o testimonial Este es el caso de Dontildea Mariacutea Estrada Medinilla de igual nombre y apellido que la mujer que acompantildeoacute a las tropas de Corteacutes en su primera entrada a Meacutexico Natural de Meacutexico publicoacute toda su obra a mediados del siglo XVII concentraacutendose principalmente en la lle-gada del Marqueacutes de Villena virrey y capitaacuten general de la Nueva Espantildea a la ciudad de Meacutexico en el antildeo 1640 Escrita en octavas reales la obra trata de las fiestas de toros y cantildeas con que se obsequioacute al citado virrey Fue impresa en Meacutexico en 1641 (Serrano y Sanz 269 402)

Mucho maacutes importante para el presente libro es Dontildea Isabel de Guevara que escribioacute en 1556 la carta en que se expone la ayuda que ofrecieron las mujeres en el descubri-miento y conquista del Riacuteo de la Plata No cabe la menor duda de que esta carta es uno

142 Para una mejor comprensioacuten del caraacutecter de esta excepcional mujer veacutease entre los numeros trabajos publicados Fredo Arias de la Canal Intento de psicoanaacutelisis de Juana Ineacutes y otros ensayos sorjuanistas (Meacutexico Frente de Afirmacioacuten Hispanista 1972) 47

143 Veacuteanse entre otros trabajos Octavio Paz Sor Juana Ineacutes de la Cruz o las trampas de la fe Georgina Sabat de Rivers En busca de Sor Juana Margo Glantz Sor Juana la comparacioacuten y la hipeacuterbole Gerard C Flynn Sor Juana Ineacutes de la Cruz Stephanie Merrim Feminist perspectives on Sor Juana Ineacutes de la Cruz Pamela Kirk Sor Juana Ineacutes de la Cruz religion art and feminism

164 JUAN FRANCISCO MAURA

de los documentos maacutes importantes con que contamos en relacioacuten a la aportacioacuten fe-menina en el proceso de la conquista de Ameacuterica Su importancia viene dada por varios factores Primero es uno de los primeros testimonios mdashsi no el primeromdash en donde se expone abiertamente la indispensable colaboracioacuten de las mujeres en el descubrimien-to y conquista de tierras en el Nuevo Mundo laquoQue si no fuera por ellas todos fueran acabadosraquo En segundo lugar la informacioacuten vertida en estas liacuteneas presenta en parte la manera de pensar de una mujer espantildeola en tales circunstancias Extraordinario tes-timonio de primera mano que nos da una idea de lo que significoacute en muchos casos el valor y entrega constantes de muchas de estas mujeres que auacuten a riesgo de perder sus vidas no dudaron en luchar al lado de los hombres por una causa que consideraban laquocomuacutenraquo

La relevancia histoacuterica de dicha carta hace que merezca ser transcrita en su totali-dad

Carta de dontildea Isabel de Guevara a la princesa gobernadora dontildea Juana exponiendo los trabajos hechos en el descubrimiento y conquista del Riacuteo de la Plata por las mujeres para ayudar a los hombres y pidiendo repartimiento

para su marido Asuncioacuten 2 de julio de 1556

Muy alta y muy poderosa sentildeora

A esta provincia del Riacuteo de la Plata con el primer gobernador de ella don Pedro de Mendoza hemos venido ciertas mujeres entre las cuales ha querido mi ventura que fuese yo la una y como la armada llegase al puerto de Buenos Aires con mil quinientos hombres y les faltase el bastimento fue tamantildea el hambre que a cabo de tres meses murie-ran los mil esta hambre fue tamantildea que ni la de Jerusalem se le puede igualar ni con otra ninguna se puede comparar Vinieron los hombres en tanta flaqueza que todos los trabajos cargaban de las pobres mu-jeres asiacute en lavarles las ropas como en curarles hacerles de comer lo poco que teniacutean limpiarlos hacer centinela rondar los fuegos armar las ballestas cuando algunas veces los indios les veniacutean a dar guerra hasta cometer a poner fuego en los versos y a levantar los soldados los que estaban para ello dar arma por el campo a voces sargentean-do y poniendo en orden los soldados porque en este tiempo como las mujeres nos sustentamos con poca comida no habiacuteamos caiacutedo en tanta flaqueza como los hombres Bien creeraacute V A que fue tanta la so-licitud que tuvieron que si no fuera por ellas todos fueran acabados y si no fuera por la honra de los hombres muchas maacutes cosas escribiera con verdad y los diera a ellos por testigos Esta relacioacuten bien creo que la escribiraacuten a V A maacutes largamente y por eso cesareacute Pasada esta tan peligrosa turbunada determinaron subir el riacuteo arriba asiacute flacos como estaban y en entrada de invierno en dos bergantines los pocos que quedaron vivos y las fatigadas mujeres los curaban y los miraban y les guisaban la comida trayendo la lentildea a cuestas fuera del naviacuteo y animaacutendolos con palabras varoniles que no se dejasen morir que presto dariacutean en tierra de comida metieacutendolos a cuestas en los

165ESPANtildeOLAS DE ULTRAMAR EN LA HISTORIA Y EN LA LITERATURA

bergantines con tanto amor como si fueran sus propios hijos Y como llegamos a una generacioacuten de indios que se llaman tinbues sentildeores de mucho pescado de nuevo los serviacuteamos en buscarles diversos modos de guisados porque no les diese en rostro el pescado a causa de que lo comiacutean sin pan y estaban muy flacos Despueacutes determinaron subir el Paranaacute arriba en demanda de bastimento en el cual viaje pasaron tanto trabajo las desdichadas mujeres milagrosamente quiso Dios que viviesen por ver que en ellas estaba la vida de ellos porque todos los servicios del naviacuteo los tomaban ellas tan a pechos que se teniacutea por afrentada la que menos haciacutea que otra sirviendo de marear la vela y gobernar el naviacuteo y sondar de proa y tomar el remo al soldado que no podiacutea bogar y escotar144 el naviacuteo y poniendo por delante a los soldados que no se desanimasen que para los hombres eran los trabajos verdad es que a estas cosas ellas no eran apremiadas ni las haciacutean de obliga-cioacuten ni las obligaba si solamente la caridad Asiacute llegaron a esta ciudad de la Asuncioacuten que aunque ahora estaacute muy feacutertil de bastimentos en-tonces estaba de ellos muy necesitada que fue necesario que las muje-res volviesen de nuevo a sus trabajos haciendo rosas con sus propias manos rosando y carpiendo y sembrando y recogiendo el bastimento sin ayuda de nadie hasta tanto que los soldados guarecieron de sus fla-quezas y comenzaron a sentildeorear la tierra y adquirir indios e indias de su servicio hasta ponerse en el estado en que ahora estaacute la tierra He querido escribir y traer a la memoria de V A para hacerle saber la ingratitud que conmigo se ha usado en esta tierra porque al presente se repartioacute por la mayor parte de los que hay en ella asiacute de los anti-guos como de los modernos sin que de miacute y de mis trabajos se tuviese ninguna memoria y me dejaron de fuera sin me dar indio ni ninguacuten geacutenero de servicio Mucho me quisiera hallar libre para me ir a presen-tar delante de VA con los servicios que a SM he hecho y los agravios que ahora se me hacen mas no estaacute en mi mano porque estoy casada con un caballero de Sevilla que se llama Pedro de Esquivel que por servir a SM ha sido causa que mis trabajos quedasen tan olvidados y se me renovasen de nuevo porque tres veces le saqueacute el cuchillo de la garganta como allaacute VA sabraacute A que suplico mande me sea dado mi repartimiento perpetuo y en gratificacioacuten de mis servicios [en el origi-nal del AHN Diversos doc 141 dice ademaacutes mande que sea proveydo mi marido de alguacuten cargo conforme a la calidad de su persona pues el de su parte por sus servicios lo merece] lo merece Nuestro sentildeor acre-ciente su Real vida y estado por muy largos antildeos De esta ciudad de la Asuncioacuten y de julio 2 1556 antildeosServidora de V A que sus Reales manos besa

Dontildea Isabel Guevara

144 Sacar agua de un riacuteo acequia o presa

166 JUAN FRANCISCO MAURA

Sobremdash A la muy alta y muy poderosa sentildeora Princesa dontildea Joana Gobernadora de los reinos de Espantildea etc ndash En su Consejo de Indias (Isabel de Guevara 619-21)

Iroacutenicamente la carta teniacutea que llegar a manos de la desdichada heredera del trono de Castilla e hija de los Reyes Catoacutelicos Juana laquola Locaraquo que habiacutea muerto el antildeo an-terior Son profeacuteticas las palabras de esta mujer no soacutelo porque sus hechos personales quedasen en el olvido sino porque incluso se ha borrado la historia de las mujeres en el Nuevo Mundo negando su presencia Por lo menos Isabel Guevara tuvo acceso a una pluma iquestCuaacutentas seriacutean las que ni siquiera sabriacutean escribir

Otra contemporaacutenea fue dontildea Leonor de Iciz que vivioacute durante la segunda mitad del siglo XVI Interesa sobre todo por los sonetos que escribioacute en elogio de Ercilla soldado que participoacute en la conquista de Chile y que se inmortalizoacute con su obra La Araucana (Serrano y Sanz 269 534) Lo mismo hizo Dontildea Bernarda Lintildeaacuten en 1610 autora de otro soneto en memoria del capitaacuten Gaspar Peacuterez de Villagraacute que participoacute en la conquista de Nuevo Meacutexico (Serrano y Sanz 270 14) Los escritos de estas mujeres tratan de de dos de las eacutepicas maacutes dramaacuteticas de la conquista

En el Peruacute y en pleno siglo XVII aparece otra fundadora de conventos Sor Bernardina de Jesuacutes que ademaacutes fue comparada con Santa Teresa por la semejanza de sus laquocartasraquo con las de la santa de Avila Fue fundadora del convento de Tacunga en Quito maacutes tarde destruiacutedo por un terremoto Dice Serrano y Sanz con respecto a su biografiacutea un tanto legendaria que fue carmelita descalza de Lima y hermana de Dontildea Mariacutea Benavides y Esquivel abuela de D Pedro de Peralta Barnuevo (Serrano y Sanz 269 553) Dicen que esta santa se alimentoacute durante treinta antildeos con laquochochos y caacutescaras de naranja hecho tan raro como increiacuteble Cuando fallecioacute reparaban las monjas en ponerle una vara de azucenas porque habiacutea sido casada y aquellas flores aparecieron milagrosamente sobre el cadaacuteverraquo (Serrano y Sanz 269 553)

Otra limentildea del primer cuarto del siglo XVII con reputacioacuten de santa fue Dontildea Luisa Melgarejo En este caso no se trata de una religiosa de oficio sino de la mujer del doctor Juan de Soto La uacutenica diferencia es que dontildea Luisa al parecer teniacutea laquovisiones y reve-lacionesraquo lo que debioacute poner nervioso a maacutes de un miembro del tribunal del laquoSanto Oficioraquo que consideraron sus escritos laquoculpadosraquo De su papel de laquosantaraquo pasa por lo tanto al de laquoposesaraquo o laquoendemoniadaraquo El inquisidor de Lima Gaitaacuten escribioacute un infor-me donde a traveacutes de la opinioacuten puacuteblica y de otras averiguaciones se deciacutea que dontildea Luisa Melgarejo laquomujer santaraquo sabiacutea cuando las almas de los difuntos saliacutean del Purga-torio El diacutea 14 de noviembre de 1623 se decidioacute tomar posesioacuten de todos los cuadernos en los que habiacutea escrito las experiencias de todos sus laquoarrobos suspensiones extasis y revelacionesraquo Estos cuadernos una vez recogidos presentaron toda una serie de al-teraciones borrones adiciones enmiendas incluso diferente letra por lo que despueacutes de haber sido examinados resultaron culpables145 Excelente imaginacioacuten debioacute tener dontildea Luisa Melgarejo la suficiente al parecer para convencer a algunos miembros de la iglesia de que en sus escritos laquohabiacutea algoraquo que mereciacutea la pena Estas cosas ocurriacutean en Lima uno de los centros culturales maacutes importantes de la vida social y poliacutetica en la Ameacuterica espantildeola Lima a comienzos del siglo XVII seguacuten el empadronamiento llevado

145 Serrano y Sanz 270 47 Veacutease J T Medina Historia del tribunal del Santo Oficio de la Inquisicioacuten de Lima (1569-1820) (Santiago Imprenta Gutemberg 1887) Tomo II 34-41

167ESPANtildeOLAS DE ULTRAMAR EN LA HISTORIA Y EN LA LITERATURA

a cabo en 1614 por el marqueacutes de Montesclaros era una ciudad de 25000 habitantes de los que 11000 eran espantildeoles El nuacutemero de religiosos y religiosas llegaba a 1720 (Pittaluga 77)

Se sabe que en la Isla de Santo Domingo durante el siglo XVI nacioacute o al menos resi-dioacute una poeta de ceacutelebre apellido en los aconteceres del Nuevo Mundo Dontildea Elvira de Mendoza de la que se conserva un manuscrito en la Real Academia de la Historia laquoCantares miacuteos que estaacuteis rebeladosraquo Eugenio de Salazar hace un elogio de ella como poeta en un Soneto a la ilustre Poeta y Sentildeora Dontildea Elvira de Mendoza moradora en la ciudad de Santo Domingo (Serrano y Sanz 270 53)

Nacida en Burgos sobre el antildeo 1590 dontildea Luisa de Padilla merece un lugar aparte dentro del grupo de mujeres escritoras de su eacutepoca Por su estilo faacutecil y castizo su no-vedad de pensamientos y su rica erudicioacuten recibioacute el siguiente comentario de Manuel Serrano y Sanz laquoPocas figuras hay en nuestra historia literaria femenil que puedan compararse a esta eminente prosista acaso la maacutes notable de cuantas florecieron en Es-pantildea durante el siglo XVIIraquo (Serrano y Sanz 270 95-96) Este comentario y comparacioacuten deberiacutea ampliarse para que tambieacuten incluyese a laquola historia literaria varonilraquo

Dontildea Luisa fue defensora de la labor que la Inquisicioacuten estaba realizando en la laquolim-piezaraquo de mujeres laquosoldados del demonioraquo que existieron en algunas provincias espa-ntildeolas en aquel tiempo Muchas de las mujeres que combinaban la magia con los po-deres curativos fueron condenadas no solamente por hombres de la Inquisicioacuten sino tambieacuten por mujeres de todas las clases sociales como es el caso de Luisa de Padilla condesa de Aranda En su obra Elogios de la verdad e invectiva contra la mentira preveniacutea contra aquellos que practicaban artes en contra de la religioacuten cristiana La magiacutea negra seguacuten Padilla era la causante de que muriesen casi tantas personas como otras causas naturales habieacutendose descubierto hasta seis mil brujas en Vizcaya y Guipuzcua con-fesando una mujer de un pueblo pequentildeo haber matado con su laquomagiaraquo a ochocientas personas (Perry 31) Eran estos laquomales de ojoraquo y maldiciones seguacuten la autora las causas de que se secasen los pechos de las madres lactantes que se separasen las parejas casa-das y que abortasen las embarazadas (Perry 31)

Si se tiene en cuenta que dontildea Luisa estuvo emparentada con la maacutes rancia aristocra-cia de su tiempo o lo que es lo mismo con algunos de aquellos que en cierta manera dirigiacutean los destinos de Espantildea en aquella eacutepoca (Duques de Lerma Duque de Uceda Marqueacutes de Cueacutellar Conde de Santa Gadea Marqueacutes de Belmonte por citar algunos) se comprenderaacute mejor su identificacioacuten con una institucioacuten que en teoriacutea velaba por la salvaguarda de los valores laquoeternosraquo de una Espantildea destinada a ser la campeona del ca-tolicismo durante los siglos XVI y XVII El padre de dontildea Luisa fue don Martiacuten de Padilla y Manrique extraordinario militar que proboacute su valor contra enemigos moriscos ingle-ses holandeses piratas berberiscos y el renegado genoveacutes Muley Faxad Fue veterano de la batalla de Lepanto donde apresoacute a cuatro galeras y acompantildeoacute con su escuadra a la reina Dontildea Margarita de Austria cuando vino de Geacutenova en 1598 laquoHabiacutea obtenido a 24 de julio de 1587 el tiacutetulo de Conde de Santa Gadea y en 1596 el de Capitaacuten General de la Armada del mar Oceacuteanoraquo (Serrano y Sanz 27095-96)

Por otra parte tambieacuten se sabe que dontildea Luisa participoacute directamente y desde tem-prana edad en la praacutectica de algunas actividades intelectuales como la historia y la arqueologiacutea a la vez que dedicaba su tiempo a virtudes cristianas como la caridad y el socorro de los necesitados (Serrano y Sanz 270 97) Resulta mucho maacutes faacutecil compren-

168 JUAN FRANCISCO MAURA

der la postura ideoloacutegica de esta gran mujer si tienen en cuenta ademaacutes de los factores antes mencionados otros tantos de caraacutecter biograacutefico concernientes a su educacioacuten y matrimonio

Otra escritora fue la mexicana dontildea Mariacutea Casilda Pozo natural de Temestla (Meacutexi-co) Nacida en el mes de abril de 1682 dejoacute escrita su biografiacutea en 16 cuadernos el ma-nuscrito original se encuentra en la biblioteca del colegio de San Gregorio de Meacutexico Fue su confesor el jesuiacuteta Domingo Quiroga que fue quieacuten la incitoacute a escribir su obra (Serrano y Sanz 270 137) Sor Juana de San Antonio aparece a principios del siglo XVII formando parte de un grupo de religiosas espantildeolas que fueron a Manila por la ruta de Meacutexico Ademaacutes de distinguirse por sus cualidades personales su obra interesa por ofrecer informacioacuten testimonial y costumbrista acerca de la forma de vestir de chinos y japoneses (Serrano y Sanz 270 225)

Otra monja esta vez ecuatoriana fue Gertrudis de San Ildefonso Nacida en 1652 profesoacute su vocacioacuten en el convento de Santa Cruz de Quito dejando escrita su vida por mandato de su confesor el padre Martiacuten de la Cruz el cual hizo una biografiacutea laquoen tres gruesos voluacutemenesraquo Gertrudis de San Ildefonso murioacute en 1709 (Serrano y Sanz 270 300) en olor de santidad

Sor Mariacutea Ana Agueda de San Ignacio nacioacute el 3 de marzo de 1695 en la dioacutecesis de la puebla de los Angeles en un rancho del lugar de Santiago Tecaliacute (Serrano y Sanz 270300) Esta monja mexicana escribioacute varias obras durante su vida conventual a lo largo de la cual desempentildeoacute el cargo de priora por muchos antildeos Entre sus obras todas de caraacutecter piacuteo y de laquoamor divinoraquo escribioacute un curioso y laquocopiosoraquo tratado de la Leche virginal de la Soberana Madre de Dios El padre Fr Juan de Villa Saacutenchez hace el siguiente comentario al respecto laquoen que hablando primero en sentido natural de los beneficios que debemos a Nuestra Sentildeora pasa a tratar en sentido miacutestico y alegoacuterico enten-diendo en la leche la doctrinaraquo (Serrano y Sanz 270301) Mexicana fue tambieacuten Sor Petronila de San Joseacute que ejercioacute como abadesa del Real monasterio de Jesuacutes Mariacutea de la ciudad de Meacutexico Escribioacute Vidas de varias religiosas ejemplares obra que tiene su im-portancia ya que al parecer laquoDe esta obra se sirvioacute D Carlos de Siguumlenza y Goacutengora para escribir su Parayso Occidental (Meacutexico 1684) seguacuten eacutel mismo declara en el proacutelogo diciendo lsquoa quien si hay algo bueno en esta historia se le debe todorsquoraquo (Serrano y Sanz 270 354) Menos conocida fue su compatriota Sor Luisa de Santa Catalina natural de Xacona laquopueblo situado en las inmediaciones de Zamora (Meacutexico)raquo siendo bautizada en 1682 Escribioacute Cartas espirituales a su confesor el P Juan Loacutepez de Aguado (Serrano y Sanz 270 361-62)146

Todos estos escritos la mayoriacutea de ellos ignorados por el gran puacuteblico tienen la im-portancia de darnos una perspectiva diferente En otras palabras ensentildearnos la maacutes refinada sensibilidad de muchas mujeres que permanecieron y en su mayoriacutea siguen permaneciendo a laquooscurasraquo de una eacutepoca tan rica de la literatura espantildeola como fue el Siglo de Oro Este siglo fue tambieacuten en su dimensioacuten literaria y artiacutestica patrimonio de la mujer

146 Para profundizar en muchas de estas escritoras hispano-americanas la consulta de la Biblioteca Hispano-Americana de Beristain de Souza resulta de capital importancia

169ESPANtildeOLAS DE ULTRAMAR EN LA HISTORIA Y EN LA LITERATURA

Sor Nada ardores divinos de una monja adolescente escritos ineacutedi-tos de una recieacuten profesa del siglo XVI147

iexclQueacute encantadores son tus amores hermana miacutea espo-sa iexclQueacute deliciosos son tus amores maacutes que el vino Y el aroma de tus perfumes es mejor que el de los baacutelsamos Miel virgen destilan tus labios esposa miel y leche hay en tu lengua y el perfume de tus vestidos es como aroma de incienso (Cantar de los Cantares 4 10-11)

Sor Nada llamada asiacute por humildad seguacuten dice el Indice de manuscritos de la Biblio-teca Nacional de Madrid es uno de los ejemplos maacutes desconocidos e interesantes que tenemos de la poesiacutea y prosa amoroso-religiosa del siglo XVII Hasta la fecha nunca se habiacutea publicado su obra e incluso hasta el antildeo 1995 para mi sorpresa no habiacutea copias microfilmadas de sus manuscritos en la Biblioteca Nacional Serrano y Sanz en su libro Apuntes para una Biblioteca de Escritoras Espantildeolas hace una escueta y pasajera mencioacuten de esta mujer y de su obra (68-69) siendo eso todo lo que hasta ahora se sabiacutea de ella Sus escritos consisten en los siguientes manuscritos

1 laquoEn queacute consiste un verdadero amor de Diosraquo 9 hojas uacutetiles en 4ordm letra del siglo XVII Biblioteca Nacional de Espantildea Manuscrito 1295926

2 laquoPintura del Propio Amorraquo laquoPintura del propio Amorraquo 10 hojas uacutetiles en 4ordm letra del siglo XVII Biblioteca Nacional de Espantildea Manuscrito 1295927

3 laquoEsplicacioacuten sobre en queacute consiste la paz del Almaraquo laquoQuartillas aacute un Alma que padece soledad interiorraquo 7 hojas uacutetiles en 4ordm letra del siglo XVII Biblioteca Nacio-nal de Espantildea Manuscrito 1295828

En cuanto a su persona soacutelo se nos dice que laquose encubrioacute con este seudoacutenimo laquoSor Nadaraquo Esta monja desconocida de origen hispanoamericano posee toda la frescura e ingenuidad de una joven apasionada metida por vocacioacuten u obligacioacuten a ejercer la profesioacuten maacutes comuacuten para mujeres de cierta clase social de su tiempo En sus liacuteneas podemos encontrar un misticismo simple incluso en algunos momentos infantil pero a su vez lleno de una fuerza y sensualidad interior poco comuacuten en escritos de este geacute-nero que desborda los liacutemites del laquoamor divinoraquo a traveacutes de los diaacutelogos entre el Alma y el Esposo Sor Nada consigue proyectar su amor a Dios maacutes allaacute de una experiencia romaacutentica Su experiencia es sincera y genuinamente miacutestica trascendiendo la imita-cioacuten o la propia creacioacuten poeacutetica ficcionalizada (Hatzfeld 30) Algunos pasajes son de un

147 Veacutease mi artiacuteculo Sor Nada ardores divinos de una monja adolescente escritos ineacuteditos de una monja profesa del siglo XVIIraquo Espeacuteculo Revista de estudios literarios 26 (2004) 1-10 Universidad Complutense de Madrid http wwwucmesinfoespeculonumero26sornadahtml

170 JUAN FRANCISCO MAURA

alto contenido eroacutetico con sustantivos y metaacuteforas que recuerdan la maacutes iacutentima unioacuten amorosa en unos casos y el tierno amor maternal en otros

[T]e miro Jesus mio desnudo a las inclemencias del tiempo y ardien-do en puro fuego de Amor por la salud de las Almas y me ensentildeas a que te ame con todo mi corason y puresa de espiritu No atendiendo ni buscando umanos intereses ni a solisitar consuelos ni regalos espi-rituales que suelen empantildear la puresa del noble corason No mi Jesus amable pues antes me ensentildeaste tu puro Amor que desnudo sean [sic] de encaminar mis passos desde el pesebre asta la cuna en donde te miro tan desnudo como el pesebre y todo Sentildeor por mi Amor (Mss 12959 26 hoja 1 v)

El manuscrito (12959 27) de la mencionada serie de tres contiene algunas correccio-nes quizaacute hechas por el confesor o quizaacute por ella misma cuando se dirige con excesiva familiaridad y arrebatado fervor a su Amado148 He escogido el manuscrito (12959 Caja 28) en primer lugar por ser el ejemplo maacutes representativo de su poesiacutea y prosa En este manuscrito encontramos de forma maacutes directa que alegoacuterica toda la frescura de un diaacutelogo entre Jesuacutes y el alma que raya como diriacutea Cervantes laquoa la llana y sin rodeosraquo (667 lib 2 cap 38) con el doloroso y a veces desesperado deseo de la entrega y la unioacuten final con el Amado La ortografiacutea no ha sido corregida respetaacutendose el texto ori-ginal149 Veamos el siguiente fragmento

Mira que te amo con Amor de padre y con Amor de esposo el mas fino y puro enamorado que no tan solo me presio de darte mi mano sino tambien todo mi cuerpo y sangre para que con mi pan de vida te sustentes y te regales a tus anchuras y que con mi propio espiritu vivas en paz como tu lo deseas y que mis amores sean unico alivio en tus trabajos en esta mortal vida pues si esto es asi y sabes que muero por darte vida dime esposa mia de que te fatigas Dame querida tus bras-sos y dime si me amas como yo te amo (Hoja 4)

148 La antologiacutea de Promis ha procurado insertar entre los textos antoloacutegicos algunos que se refieren a la es-critura de mujeres fundamentalmente de aquellos generados en el interior de los espacios conventuales Estos textos se fundan como laquohistorias de vidasraquo y responden casi siempre a los requerimientos de los confesores de las monjas coloniales En este sentido resulta valiosiacutesima la incorporacioacuten de la llamada Relacioacuten autobiograacute-fica de Sor Ursula Suaacuterez como una muestra significativa de la escritura monjil entendida en esta eacutepoca (como tambieacuten en la tradicioacuten europea medieval) inserta en las denominadas laquolabores de manoraquo de las religiosas ya que el texto escrito por mandato se convertiacutea en una suerte de entramado o tejido linguumliacutestico es decir en un nuevo bordado que la mayor parte de las veces el confesor convertido en censor iba haciendo tachando y enmendando En la antologiacutea Promis agrega un texto de Sor Tadea Garciacutea de la Huerta titulado Relacioacuten de la inundacioacuten que hizo el riacuteo Mapocho de la ciudad de Santiago de Chile en el monasterio de Carmelitas titular de San Rafael el diacutea 16 de junio de 1783 se trata de un poema tipo romance escrito en versos octosilaacutebicos y que da cuenta de lo sucedido ese diacutea en el convento (Resentildea de la literatura del reino de Chile de Joseacute Promis Eddie Morales Pintildea httpwwwupaclpublicaciones2002literatura_promishtm)

149 Son frecuentes las faltas ortograacuteficas Una de ellas es el uso constante del seseo La ausencia de acentua-cioacuten y puntuacioacuten exceptuando alguacuten punto o coma arbitrario no seguido casi nunca de mayuacutescula inicial lo mismo que el uso igualmente aribitrario de la h o de b v r q g j m n x etc No olvidemos de la misma forma la laxitud linguumliacutestica existente en el siglo XVII (no sabemos a queacute parte de eacuteste pertenece el manuscrito) asiacute como la joven edad de la monja

171ESPANtildeOLAS DE ULTRAMAR EN LA HISTORIA Y EN LA LITERATURA

Los versos del presente manuscrito poseen la misma fuerza que tiene su prosa Con una estructura estroacutefica indefinida estaacuten aparentemente corregidos por alguien que tu-vo la oportunidad de conocer personalmente a la autora Muy probablemente se trate del padre al que hace referencia al principio del primer manuscrito laquoMandame el Pd que le declare en que consiste un verdadero amor a Diosraquo a continuacioacuten continuacutea con su caracteriacutestica humildad laquo[O]bedesere y dire lo q Dios me inspire segun mi rudesa y simplisidadraquo (Mss 12959 26) En cuanto a la fuerza pasional de esta joven observamos con cierta tristeza coacutemo aparece sublimada en sus escritos con toda la enegiacutea de una joven mujer llena de intensidad y vida pero encerrada en los liacutemites de un convento Veamos un ejemplo en donde responde el Alma en los siguientes versos

O mi enamorado Jesus O mi dulse y tierno amanteO alegria de los sielos O dulse Jesus amable

(Toda Sentildeor me derrito toda Sentildeor me desagoy quiero vivir por ti ea sentildeor abrasadme) [Tachado en el original]

Toda Sentildeor me derrito toda Sentildeor me desagoy quiero morir por vos ea Sentildeor que ya acabo

Ya tus amores me llaman ya tus perfumes me traencon suspiros y agonias Sentildeor hasta que te alcanse

O mi Jesus amoroso no puedo mas dilatarmeya la pasiensia me falta dulse Jesus abrasadme

(No puedo vivir sin vos no puedo mas dilatarmeya la pasiensia me falta dulse) [Tachado en el original]

No puedo vivir sin vos mi dulse Jesus amablepues me teneis echisada siendo mi esposo y mi Padre

Ay que me abraso Ay que me quemo del Amor deJesus nasareno como no tocan y tantildeen a fuego150

Estos versos llenos de arrebato sublimado conectan con toda la tradicioacuten miacutestica es-pantildeola que se remonta a Ramoacuten Llul y que culmina en el maacutes universal de nuestros

150 En toda la fuerza y simbologiacutea del amor maacutes iacutentimo del maacutes alto y sublime placer de la unioacuten de los amantes tal como lo encontramos en el Cantar de los Cantares y en San Juan de la Cruz Leemos en la Biblia

Ya me he quitado la tuacutenica iquestCoacutemo volver a vestirme Ya me he lavado los pies iquestCoacutemo volver a ensuciarlosMi amado metioacute su mano por el agujero (de la llave) y mis entrantildeas se estremecieron por eacutel Me levanteacute para abrir a mi amado Mis manos destilaron mirra y mis dedos mirra exquisita en el pestillo de la cerradura (5 3-5)

Nos ocurre lo mismo con San Juan de la Cruz en su insuperable poema laquoLlama de amor vivaraquo

iexclOh cauterio suaveiexclOh regalada llagaiexclOh mano blanda iexclOh toque delicadoque a vida eterna sabey toda deuda pagaMatando muerte en vida la has trocado

172 JUAN FRANCISCO MAURA

miacutesticos San Juan de la Cruz Esta tradicioacuten se extiende hasta finales del siglo XVII esto es hasta los finales del Barroco siendo un poco maacutes tardiacuteo en la Ameacuterica espantildeola Sin tener como propoacutesito discutir en el presente trabajo a queacute corriente miacutestica pertenece la obra de Sor Nada es necesario resaltar no obstante el hecho de que estaacute escrito por una mujer y ademaacutes de tierna edad El manuscrito 12959 Caja 26 termina con estas pa-labras laquo[T]odas estas boverias escrivi por entretenimiento siendo resien profesa en la religion Sor Nadaraquo Mas no por la juventud de su autora los escritos dejan de tener lo-gradas metaacuteforas imaacutegenes y siacutembolos sacados de la naturaleza La alegoriacutea de la unioacuten matrimonial poseeacute el fuego liacuterico de la maacutes apasionada de las relaciones amorosas vivi-ficada por perfumes flores insectos animales escarchas nieves o abrojos Por lo tanto aunque la narracioacuten destile cierta ingenuidad no carece por ello de un vocabulario rico con el sabor popular de la poesiacutea de los cancioneros y romances de tradicioacuten renacen-tista No ha sido otra mi intencioacuten que la de rescatar del olvido unos escritos en prosa y en verso llenos de frescura y espontaneidad que nos muestran la pasioacuten con que la joven novicia se laquoentrega en cuerpo y almaraquo a los menesteres de su profesioacuten guiada por un padre espiritual en esos primeros antildeos de formacioacuten Esta ha sido la razoacuten por la que presento a continuacioacuten el citado manuscrito en su totalidad

Sor Nada (Mss 1295928)

laquoEsplicacion sobre en que consiste la paz del AlmaraquolaquoQuartillas a un Alma que padece soledad interiorraquo

[7 hojas utiles en 4ordm letra del siglo XVII]

+

Esplicacion sobre en que consiste la paz del Alma

Pareseme segun mi rudo entender que la verdadera paz del Alma con-siste en una muy pura y buena consiencia en un corason liso y bien intensionado en una verdadera rectitud de espiritu en el qual el Alma procura bolar a Dios sin jamas detenerse a respetos umanos ni reparar en que me diran ni de que me censuraran sino me apresuro a seguir a unos entenderes y pareseres dorados en los quales pretende el mundo engantildear y ensuciar si se puede la puresa de un corason unicamente de Dios y de su Santa ley y se lo conserva cristalino con la divina asis-tencia de la gracia y comprendido de su Amor y temor siguiendo la luz divina de tan amante Sentildeor Dios y ombre verdadero con que este ilustrado corason ni se altera ni se mueve por los disfrasses dorados que ase el mundo y sus moradores mayormente con falssas amistades aunque con ellos muestre buena intension Con la misma grasia y luz de Dios conose el buen corason estos disfrasses que le ase el mundo y se retira de todo con espiritu y valor esto sin la menor alterasion sino que en suma paz se retira a buscar a Dios dentro de su mismo corason

173ESPANtildeOLAS DE ULTRAMAR EN LA HISTORIA Y EN LA LITERATURA

y se abrasa con su pura verdad en la qual se le descubren mil interio-res secretos tan solidos puros y verdaderos que la misma Alma queda abismada y de puro grandes no los puede bien comprender ni esplicar pero estos mismos secretos divinos le sirven de espuelas para no solo correr sino bolar con pies de plumas en seguimiento de su bien ama-do Jesus y como este soberano Sentildeor es tan amante de sus espossas las Almas luego que la ve bolar con pies de plumas la sale al encuen-tro en despoblado campo que se deve de llamar Campo de Amor de Dios y el mismo Sentildeor se viene a las manos por ser Dios que nos ama con Amor infinito de Padre benigno y amoroso con que asiendose en contra deso este divino enamorado en lo interyor de el Alma que le busca con ansias de servirle y amarle y en aquella soledad traban una conversasion amorosa y sensilla como la pluma simple de quien esto escrive

Divino enquentroDios y el Alma en la soledad

O Soberano Principe de la paz dise el Alma tus perfumes me traen a ti bolando porque alla en el mundo y sus valedores me pretendian engantildear y entretenerme con pegaminossas amistades que facilmen-te me pudieran envenenar y matarme apartandome de ti Mi dulse Jesus amable mi Redentor Soberano que con tantas ansias me sales al enquentro como siervo [ciervo] erido de mis Amores los quales tu Amor me ofrese para que con tu mismo Amor te ame y te sirva en paz sin perturbarme ni contristarme ni cansarme de padeser pasando si se ofrese por escarchas nieves espinas ni abrojos ni por otros diverssos trabajos ni piedras de contradision que tu me puedes permitir pues por mas que el mar se levante con sus ferosses olas contra mi ni piedras se me tiren al rostro en todo Sentildeor me quieres con serenidad pasifica sin la menor perturbasion Todo Sentildeor quieres que lo tome con Serenidad de espiritu y asi vengo a ti bolando para que mejor me ensentildees a vivir segun las leyes de tu noble condision que me son muy agradables por mas que el mundo me las despresie por segir sus vanidades y torsidas intensiones con apariensias de bien y con este engantildeo y bien me quie-ro mas a mi que no a mi proximo veo que segun mi pareser se pierden muchas Almas y tambien de aquellos que se depresian y pasan por muy espirituales Con que me paresen pocos los que llegan a padeser con desnudes151 de espiritu por tu purisimo Amor y me parese essas se quedan muy atrasadas en la virtud por el peligro de bolver muy atras el paso de modo que se pueden despentildear y pereser en su misma desgra-sia ya por soberbia o por otras enfermedades que se les pega al corason y asi lo pasan como siegos ignorantes sin advertir en sus peligros

151 La letra en cursiva es miacutea

174 JUAN FRANCISCO MAURA

este aquerdo Sentildeor y otros que tu verdad me ensentildea me ase venir uyendo de las paredes del mundo y me vengo a ti Dios mio bolando con las dos Alas del Amor y temor que tu mismo Amor me ofrese tan de gracia y tan de grado que no se duentildeo mio con que lo responder a tan soberano beneficio y finesa de tus entrantildeas de Amorvengo Sentildeor y esposo mio unicamente a descansar en ti pues los peli-gros del camino me an puesto en mucho sobresalto temiendo el per-derte y sin ti perderme para siempre por una eternidad sin fin pues deseo amado mio ganarme ganandote a ti y vivir en ti aora en vida y despues eternamente y estos cuidados me traen fatigada molida y cansada y no podre tener alivio y descanso sino viendome entre tus brassos aunque sea estando en cruz pues ese es el fin de mis deseos vivir y morir en ti ablame mi cordero manso y ensentildeame a que ver-daderamente te ame como fiel esposa ea mi caro amigo dame la ma-no pues sabes Amor mio que en mi no ay mano sin tu misma mano y asi mi Dios y Sentildeor mi Principe Soberano con umilde rendimiento y deseos de alcansarte te suplico me des la mano y me consueles en estos mis trabajos Deseo Sentildeor vivir en paz y los malos amores de mi Naturaleza flaca no me dejan detentar y no quieren por mi desgrasia atropellar con las leyes de tu Amor ni quisiera perturbar mi corason quando me veo con un torvellino de olas y contratiempos que a menu-do me suelen sercar pero si tu Sentildeor me das la mano nada temo sino que me aseguro y vivire en paz sin que me fatiguen los contratiempos pues mi mano en la tuya y mi espiritu en el tuyo por mas borrascas que me envistan no seran bastantes para rendir mi voluntad a la suya bien si para pronunsiar un fiat que resuene bien atras en tus oidos y que en medio de mis fatigas me ponga a cantar tus divinas misericor-dias hea Sentildeor ya pretendo serrar mis labios por no desir mas bove-rias y deseo Sentildeor oir tus palabras de vida eterna abla Sentildeor que tu sierva oye con atension y cuydado mira mi Dios que se me ase tarde y espero con prisa deseando saborearme y aprovecharme de los ecos de tu Santa dotrina pues todas tus palabras saben a eterna vida callen pues mis sentidos y potensias y todo se ponga en paz pues mi dulse y soberano Sentildeor no se escusara de ablar me aun que en mudo silensio hea mi gran Prinsipe de la paz ablame que tus puros amores me traen perdida por estos asperos montes y mis cortos pasos no te pueden dar alcanse mirame mi Dios a tus pies postrada como un vil gusano y me-nor ormiga de la tierraabla Jesus y dise a su esposa el Alma querida esposa mia que me pides y por que te muestras tan fatigada y mal sufrida no vives como corde-rita del campo buscando de mis pechos el sustancial pasto mi Amor no te sustenta y mi grasia te promete eterna vida pues dime amada de que te fatigas y te muestras mal sufrida mira que te amo con Amor de padre y con Amor de esposo el mas fino y puro enamorado que no tan solo me presio de darte mi mano sino tambien todo mi cuerpo y

175ESPANtildeOLAS DE ULTRAMAR EN LA HISTORIA Y EN LA LITERATURA

sangre para que con mi pan de vida te sustentes y te regales a tus an-churas y que con mi propio espiritu vivas en paz como tu lo deseas y que mis amores sean unico alivio en tus trabajos en esta mortal vida pues si esto es asi y sabes que muero por darte vida dime esposa mia de que te fatigas Dame querida tus brassos y dime si me amas como yo te amoResponde el Alma152 Tu mi Dios sabes si yo te amo pues de mi solo se que mis deseos y ansias buelan a ti mas no alcanso a saber si te amo como tu de-seas ser amado y como desconfio tanto de mi y de mis prosederes falssos temo Dios mio perderme y perderte y asi Sentildeor pues no desechas mis Amores y te muestras tan fino en amarme te pido me ensentildees a vivir segun las leyes de tu pura verdad y fina condisionhija mia dise Dios la prueva de un verdadero Amor consiste en sufrir callar y padeser por mi unico Amor y en todo seguir mis pasos sin ja-mas retroseder por mas fragoso que se muestre el camino pues nunca seran tantas las espinas las escarchas ni las nieves ni los vientos bo-rrascosos que te se ofrescan pasar por mi Amor como los que mi tierno y desinteresado Amor paso por ti y siempre con mis pies descalssos y asi hija y esposa mia muestrate costante en seguir lo perfecto de mis passos pues mi braso fuerte sera en ti y peleara por ti y te sera el todo en tus nesesidades y mi Amor te convertira en dulse y suave lo amargo y molesto a la condision de la carrne

Responde el Alma

O mi enamorado Jesus O mi dulse y tierno amanteO alegria de los sielos O dulse Jesus amable

(Toda Sentildeor me derrito toda Sentildeor me desagoy quiero vivir por ti ea sentildeor abrasadme) [Tachado en el original]

Toda Sentildeor me derrito toda Sentildeor me desagoy quiero morir por vos ea Sentildeor que ya acabo

Ya tus amores me llaman ya tus perfumes me traencon suspiros y agonias Sentildeor asta que te alcanse

O mi Jesus amoroso no puedo mas dilatarmeya la pasiensia me falta dulse Jesus abrasadme

(No puedo vivir sin vos no puedo mas dilatarmeya la pasiensia me falta dulse) [Tachado en el original]

No puedo vivir sin vos mi dulse Jesus amablepues me teneis echisada siendo mi esposo y mi Padre

152 La aparicioacuten de una mayuacutescula al principio de una oracioacuten es algo totalmente arbitrario en este ma-nuscrito dada la libertad ortograacutefica de la autora Como se puede observar en la mayor parte de las veces no es el caso

176 JUAN FRANCISCO MAURA

Ay que me abraso Ay que me quemo del Amor deJesus nasareno como no tocan y tantildeen a fuego

Responde Jesus Hija mia tus simples vozes oygo y aunque resuenan bien a mis oidos pero te deseo mas mansa y pasifica en tus fervores ya sabes que no siempre as de vivir en mantillas ni a los pechos de tu Madre por que es rason que padescas con espiritu fuerte como mu-jer valerosa por que a una esposa del Rey soberano y prinsipe de la paz no le estan bien chiquerias ni fervores de nintildea malcriada y ya es ora que la destete su Madre la Naturaleza y que empesando su nueva vida camine con el favor de mi grasia sigiendo mis passos de eterna vida esto con sus pies descalssos segun mis leyes de Amor puro y desinteresado lo tienen ordenado153 y vivir en paz como lo deje en-cargado a mis apostoles Santos repitiendoles varias vezes Vivir en pas y caridad esto es un vivir en Dios y Dios en el Alma y asi hija mia el Alma que vive en paz vive en mi Como mis cortesanos en el cielo y pues me pides que te ensentildee a vivir segun las leyes de mi condision Repito el desir que te debes mostrar sufrida en todo tiempo y estado sin permitir en tu corason que ni aun los fervores se adelanten con estremos ni ademanes sino atiende y aprende de mi purisima Madre pues siempre la veras si bien lo consideras que mientras vivio en el mundo en todos sus trabajos se mostro firme fuerte costante como piedra diamante Pues mirandome nintildeo entre sus brasos desnudo en el pesebre desnudo y crusificado en los brassos de una cruz En estos y otros passos no se mudo su rostro sino que en suma serenidad y pasifico corason toda se sacrificaba enteramente en los brassos de mi Amor y rendido su corason y voluntad en la de mi eterno Padre por ejemplo te la doy y deseo que aprendas de sus nobles calidades pues te aseguro carisima que las leyes de mi condision y pura verdad todo lo allaras enserrado en el corason de mi purisima Madre sedle fiel y descansaras en paz

+

Quartillas a un alma que padese soledad interior

1Un Alma afligida y tristese ve en un campo desiertay en el su esposo la tieneAtormentada y sedienta

153 Es a traveacutes de estas liacuteneas lo que hace suponer que la autora de este diaacutelogo amoroso entre el Alma y Je-suacutes es novicia esto es laquoque estaacute empesando su nueva vidaraquo En las mismas liacuteneas una vez maacutes se hace alusioacuten al laquodesteteraquo de su vida civil laquoa una esposa del Rey soberano y principe de la paz no le estan bien chiquerias ni fervores de nintildea malcriada y ya es ora que la destete su Madre la naturalesaraquo (fol 5)

177ESPANtildeOLAS DE ULTRAMAR EN LA HISTORIA Y EN LA LITERATURA

2Pendiente se ve en el AyreSolo un hilo la sustentasin tocar el pie en el sueloporque del no tome tierra

3Mirandola esta yto a ytoaquel sol que la atraviesay la enviste con sus rayosmas ella no pestantildeea

4Como sigarra padese y como a tal se atormentabatiendo sus mismas Alasy el corason se atraviesa

5Con penas sustos temoresquando se mira assi mesmasin tener valor en nadaporque es la misma flaquesa

6Pero el Amor de su esposotoda su atension le llevay la pone en un abismopero cubierto en tiniebla

7Desea dar algun bueloy subir con ligeresapero se mira travadacon una fuerte cadena

8Clama suspira y padeseMas del todo se sujetaRindiendo su voluntadA la divina clemencia

9Los enemigos del AlmaCruelmente le asen guerray ella aunque firme y constantelos reselos la atormentan

178 JUAN FRANCISCO MAURA

10de todos modos padeseaunque gosa la asistensiadel divino esposo amadoque en su interior se recrea

11Solo de verla penary con verla tan serenadise resibe mil gustosde su sigarra pequentildea

12Le sabe el mundo a mil yelesy su trato le atormentaviendo en el mil falsedadesque todas saben a tierra

13Para poderse librardeja de correr y buelacon las Alas del Amory el mismo Amor se la lleva

Una vida dedicada a un amor divino un amor que le haraacute llenar un buen nuacutemero de cuartillas dedicadas a tan alta empresa Se desconoce si la vocacioacuten de Sor Nada con-tinuoacute con tanta intensidad el resto de sus diacuteas Ciertamente la vida en el covento no era faacutecil En algunos casos la experiencia era traumaacutetica incluso fatal para algunas de las adolescentes de la Ameacuterica Espantildeola Las reglas del claustro eran severas por varias razones Estas joacutevenes si no teniacutean el permiso de la superiora no podiacutean recibir visitas no podiacutean volver a sus casas su correspondencia era censuraba y no podiacutean salir del periacutemetro conventual Igualmente se levantaban antes del amanecer para oir misa tra-bajaban el resto del diacutea y lo maacutes interesante es que muchas veces esta vida era aceptada por muchas

Page 15: Tercera parte: Mujeres en la vida intelectual - …parnaseo.uv.es/Editorial/Maura/TerceraParte.pdf · La Biblia, por su parte, hace repetidas menciones de la mujer y sobre el comporta-

145ESPANtildeOLAS DE ULTRAMAR EN LA HISTORIA Y EN LA LITERATURA

ciacutea mucha ventaja Toledo Llegoacute la fiesta vio la riqueza que se mostroacute en los vestidos de las mujeres adornos de ventanas altares y calles dijo que la riqueza de Toledo en este diacutea mostrada no haciacutea muchas ventajas a la de esta ciudad Pues es cierto que hay tanta diferencia de entonces ahora en lo que vamos tratando como de vestidos de aldea a vestidos de corte con justo tiacutetulo se podriacutea moderar por los virreyes esta soberbia pero no seacute por queacute no se modera y siacute seacute por queacute ni los maridos no tienen aacutenimo para moderarlo ni los gobernadores tampo-co (Lizarraga 38 lib 1 cap 51)

Seriacutea injusto y exagerado afirmar que los descubrimientos transoceaacutenicos se hicieron por la presioacuten que ejercieron las mujeres sobre sus amantes para que estos les trajesen laquomaacutes raacutepidamenteraquo todo ese laquosin finraquo de delicadezas exoacuteticas de todo tipo que existiacutean en el Oriente Lo que siacute es cierto es que las mujeres fueron grandes consumidoras de perfumes afeites sedas joyas y otros bienes suntuarios siendo muy conscientes de lo que hoy entendemos como laquomodaraquo Martiacuten Fernaacutendez de Navarrete en su indispensa-ble trabajo sobre los primeros viajes transoceaacutenicos Coleccioacuten de los viajes y descubrimien-tos menciona de paso la situacioacuten de algunas mujeres durante el siglo XV Es precisa-mente esta eacutepoca en la cual portugueses y castellanos entran en conflicto por el control de algunas posesiones en las costas africanas

y crecioacute el lujo a tal extremo que aun las mujeres de los menestrales y artesanos se confundiacutean en los vestidos con las de alto linaje y esta-do usando ropas de ricas telas de seda de oro de lana con forros de martas y pieles y con guarniciones de oro plata y aljoacutefar cuyo gasto por ser ruina de las familias se tratoacute de corregir aunque sin efecto en las Cortes de Palenzuela (M Fernaacutendez de Navarrete 75 21)

El mismo autor resalta la importancia que tuvo para el comercio de Castilla el contar con una buena armada que protegiese a los barcos de piratas y otros peligros Gracias a los inventarios que se han conservado del duque de Beacutejar y de don Alvaro de Zuacutentildeiga conocemos el lujo de estos sentildeores en perlas orientales piedras preciosas telas y demaacutes utensilios de gran valor134 Existe una Real Pragmaacutetica de Fernando el Catoacutelico a Diego Coloacuten en donde aparece nuevamente la conciencia que se teniacutea sobre la manera de ves-tir que deberiacutean llevar las damas castellanas

R PRAGMAacuteTICA SOBRE EL VESTIR Y GASTAR SEDA EN LAS IN-DIAS Valladolid 12 de noviembre de 1509 Don Fernando etc A vos Don Diego Coloacuten nuestro Almirante y Gobernador de las Indias del mar Oceacuteano y a otro cualquier mi Gobernador etc Sepades que yo he sido informado de los muchos gastos y costas que se han hecho y facen y se esperan hacer si yo no lo mando proveer y remediar en el vestir y gastar de las sedas y brocados y bordados en la Isla Espantildeola y en las otras islas y poblaciones de las dichas islas del mar Oceacuteano tra-yendo en ello mucho desorden y yo por el amor y voluntad que tengo

134 AGI Indiferente 418 Libro 2 fol 87v Publicada en DH Am Tom 6 paacutegina 191 DIA Tomo 31 pag 470 DIU Tomo 5 paacuteg 166 Seguacuten la RC a Diego Coloacuten fechada a 14 de noviembre de 1509 es la pragmaacute-tica que se guarda en Castilla sobre la manera de vestir (DIU Tomo 5 paacutegina 174)

146 JUAN FRANCISCO MAURA

a esas dichas Indias y a los pobladores dellas y porque deseo que ellas se aumenten y acrecienten por las haber ganado y descubierto por la gracia de Nuestro Sentildeor con nuestra industria trabajo y costa y los po-bladores dellas no hagan sobre lo suso dicho tan excesivos gastos sino pues que van a ellas con deseo y voluntad de se ayudar y aprovechar del oro que por gracia de Nuestro Sentildeor se descubre de cada diacutea se detengan en lo gastar en semejantes cosas para se aprovechar dellos en otras cosas que maacutes les convenga asiacute para sus personas como para sus haciendas y por evitar y excusar lo suso dicho mandeacute lo platicar con algunos de mi Consejo y por ellos visto se halloacute que porque nuestros suacutebditos y naturales que viven y estaacuten en dichas Indias no gasten sus haciendas en semejantes desoacuterdenes y que las conserven y guarden pa-ra sus menesteres y por el bien y el pro comuacuten de todos generalmente mando dar esta mi carta premaacutetica sancioacuten la cual quiero y mando que haya fuerza y vigor de ley bien ansiacute y a tan cumplidamente como si fuese fecha y promulgada en Cortes por lo cual ordeno y mando que en cuanto a mi merced y voluntad fuere ninguna ni algunas personas de cualquier ley estado condicioacuten que sean que estuvieren de morada o vivienda o en otra cualquier manera en la dicha Isla Espantildeola y en las otras islas desas dichas Indias y tierra firme no puedan traer y traigan ropa alguna de brocado ni de seda ni de chamelote de seda ni zarzahaacuten ni tercenel ni tafetaacuten ni vainas ni correas de espada ni en cinchas ni en sillas ni en alcorques ni en cosa alguna ni tampoco puedan traer ni trai-gan bordados de seda ni chapado de plata ni de oro de martillo ni fila-do ni tejido ni de otra cualquier manera pero que las personas que tu-vieren en las dichas Indias bienes asiacute muebles como raiacuteces que valgan hasta la cuantiacutea de mil castellanos que ellos y los hijos que tuvieren de hasta edad de catorce antildeos traigan jubones y caperuzas y bolsas y ribe-tes y pestantildeas de seda de cualquier color que quisieren con tanto que en una ropa no traigan maacutes de un ribete y que no haya en los dichos ribetes y pestantildeas maacutes anchura de cuanto un dedo pulgar y que no se traiga en los ruedos de las ropas y que puedan traer becas de tercenel y de tafetaacuten y de papahigos de camino aforrados en el mismo tercenel y tafetaacuten y ansiacute mismo permitimos que puedan traer de seda las cora-zas y guarnecer las faldas y gocetes y capacetes y baberas y quejotes y traer cojines de seda en la silla de la jineta y que las mujeres de las tales personas que tuviesen bienes en la dicha cuantiacutea de los dichos mil castellanos y sus hijas siendo doncellas puedan traer gonetes y corseacutes y fajas de dos varas de largo de seda y [borradas dos letras por mancha de tinta] mas y de lo de vestir y mudar cuando quisieren y por bien tuvieren quier sea moyil o faldilla o cota o haacutebito u otra cualquier ropa con tanto que juntamente no puedan vestir ni vistan maacutes de una ni les pongan trepas ni tiras de seda ni de brocado ni de oro tirado ni tejido ni relido ni en las ropas de pantildeo pongan cortapisas ni lisonjas ni trepas ni tiras ni otra guarnicioacuten alguna de seda ni de brocado salvo que puedan traer un ribete o pestantildea de seda de anchura de un dedo pulgar asiacute en

147ESPANtildeOLAS DE ULTRAMAR EN LA HISTORIA Y EN LA LITERATURA

las ropas de seda como en las de pantildeo en los ruedos de las faldas y para las costuras y no otra cosa alguna y que no traigan la dicha seda en las guarniciones de las mulas ni en angarillas ni en sillas ni en pantildeos ni en otra cosa alguna y que ansiacute mismo no puedan traer mantillas de seda ni enforradas en seda sopena que l que contrario hiciere pierda las ro-pas que ansiacute trujere vestidas por primera vez y sea repartido la mitad para el juez que lo juzgare y la otra mitad para el juez que lo acusare y por la segunda que pierda la ropa y se parta como dicho es y sean desterrados de la isla donde viviere para dos antildeos y por cuanto algu-nas personas de los que nuevamente destos reinos de Castillaa van a se avecindar y poblar y estar en las dichas Indias y son de honra acae-ce que no llevan tantos bienes que valgan la dicha cuantiacutea de los mil castellanos que mando que tengan los que hubieren de traer seda en la manera que dicha es que a eacutestos tales no se entienda y extienda lo suso dicho y que puedan traer la dicha seda seguacuten y en la manera que dicha es y no maacutes hasta tanto que haya un antildeo que estaacuten en las dichas Indias que corra y se cuente desde el diacutea que llegare fasta ser cumplido y que siacute cumplido no tuviere bienes que valgan la dicha cuantiacutea de los dichos mil castellanos que no puedan traer seda ninguna so la dicha pena de suso contenida la cual mando a vos las dichas nuestras justi-cias y a cada una de vos que esta mi carta y todo lo en ella contenido y cada cosa y parte dello guardeacuteis y cumplaacuteis y ejecuteacuteis por manera que se cumpla y ejecute lo en ella contenido so pena de perdimiento de los oficios y que seades inhaacutebiles para haber otros semejantes y que pagueis la estimacioacuten de la tal ropa que dejardes de ejecutar y para que lo susodicho sea notorio y ninguno dello pueda pretender ignorancia mando que esta mi carta sea pregonada puacuteblicamente por las plazas y mercados y otros lugares acostumbrados desas dichas islas por prego-nero y ante escribano puacuteblico(Konetzke Coleccioacuten 23)135

Tambieacuten se sabe de las joyas que Rodrigo Ponce de Leoacuten marqueacutes de Caacutediz debioacute dar a dontildea Beatriz Pacheco (M Fernaacutendez de Navarrete 75 22) Lo que siacute queda claro es que la navegacioacuten seraacute a partir de estos antildeos la forma maacutes raacutepida e importante para comerciar con aquellos paiacuteses de Oriente que antes soacutelo era posible alcanzar a traveacutes de rutas terrestres Existe un documento muy representativo de este periodo sobre la posesioacuten de joyas de gran valor por parte de miembros de una de las familias maacutes repre-sentativas residentes en Ameacuterica Los protagonistas son en este caso el almirante Diego Coloacuten y su mujer Mariacutea de Toledo Dice el documento que El jurado Antoacuten Bernal y Juana de Hoces su mujer vecinos de Sevilla en la collacioacuten de Santa Cruz reciben de Diego Coloacuten Almirante de las Indias laquoun joyel muy rico de oro de hechura de escudo que tiene en medio una piedra preciosa grande esmeralda e debaxo de la dicha piedra un rostro de aacutengel labrado en el mismo oro esmaltado e a cada lado del dicho rostro una piedra preciosa diamante pura y debaxo una piedra gruesa pendiente que pesa el dicho

135 AGI Indiferente 418 Libro 2 fol 87v Publicada en DH Am Tom 6 paacutegina 191 DIA Tomo 31 pag 470 DIU Tomo 5 paacuteg 166 Seguacuten la RC a Diego Coloacuten fechada a 14 de noviembre de 1509 es la pragmaacutetica que se guarda en Castilla sobre la manera de vestir (DIU Tomo 5 paacutegina 174)

148 JUAN FRANCISCO MAURA

joyel con todo lo susodicho medio marcoraquo Los citados Antoacuten Bernal y su esposa se dan por pagados de todo lo que se les adeudaba y se obligan a su vez a devolver el joyel al Almirante si este les paga en dinero El 23 de agosto de 1530 siete antildeos despueacutes la virreina canceloacute la anterior obligacioacuten y recuperoacute el mencionado joyel (AHPS Libro del antildeo 1523 Oficio I Escribaniacutea Alonso de la Barrera Folio 1173 Fecha 3 de diciembre) En la misma casa del almirante otra mujer Briolanga Muntildeiz su tiacutea materna se obliga a pagar al mercader genoveacutes Batista Catantildeo 22 ducados de oro laquopor cierto raso que le comproacute y habiacutea de ser pagado en el puerto de Santo Domingoraquo (AHPS Libro del antildeo 1509 Oficio V Libro uacutenico Escribaniacutea Francisco Esquibel Folio Primer tercio del lega-jo Fecha 9 de marzo) Dontildea Briolanga recibiacutea cada antildeo para su mantenimiento 100000 maravediacutes del almirante mayor de las Indias por medio de Gaspar Gurricio monje del monasterio de Santa Mariacutea de las Cuevas (AHPS Libro 1510 Oficio XV Libro II Es-cribaniacutea Bernal Gonzaacutelez Vallesillo Folio primer tercio del legajo Fecha 4 de julio) Resulta interesante hacer notar la temprana presencia (1516) de un ingleacutes en Santo Domingo involucrado igualmente en la compra de telas Se trata de laquoNicolas Arnoteraquo residente en Santo Domingo que debe pagar a Mariacutea Caldera mujer del comendador Diego Barbosa el valor de una cama de sargas de colores de Flandes (AHPS Libro del antildeo 1516 Oficio XV Libro II Escribaniacutea Bernal Gonzaacutelez Vallesillo Folio Primer tercio del legajo Fecha 28 de agosto) Sin embargo anteriormente a esa fecha (1514) encontramos a un veneciano casado con una inglesa mucho maacutes ceacutelebre en sus viajes trasoceaacutenicos laquoSevastiaacuten Cavotoraquo capitaacuten del rey don Fernando y vecino de Sevilla136

De forma paralela se observa tambieacuten un cierto desenvolvimiento de la mujer en su medio lo que equivaliacutea a intercambios de informacioacuten a todos los niveles incluyendo por lo tanto el cultural No era extrantildeo que tuviesen libros de comedias a mano y que llegasen incluso a escribir comedias ellas mismas Efectivamente la sospecha de que las damas llegasen a escribir comedias estaba bien fundada Veacuteanse algunos ejemplos Ana Caro Malleacuten de Soto una de las maacutes famosas dramaturgas de la Sevilla del siglo XVII autora de El conde de Partinupleacutes utiliza el tema del amor en sus maacutes diversas variantes fiacutesicas y espirituales como el eje de casi todas sus obras (Perry 57) Este hecho por otra parte indica el favor del puacuteblico ante un tema tan popular Veacutease otro ejemplo

The drama of this period did not present love and marriage as a simple partnership however and many dramatists contrasted laquoprofaneraquo with laquohonestraquo love Feliciana Enriacutequez de Guzmaacuten who wrote Tragicome-dia Los jardines y campos sabeos in Seville in the early seventeenth cen-tury presented the hero Clarisel as the victim of laquopervertedraquo and fickle Belidiana in part 1 so blinded by her beauty that he feels himself laquoin shackles and in chainsraquo (Perry 57)

Pero las damas espantildeolas de esta eacutepoca no soacutelo escribiacutean comedias algunas tambieacuten se aventuraron a escribir tratados cientiacuteficos Uno de estos casos fue el de Oliva Sabu-co de Nantes Barrera que a finales del siglo xvi escribioacute un tratado meacutedico sobre la naturaleza humana advirtiendo que la lujuria podiacutea perjudicar al cuerpo Se basaba en

136 Sebastiaacuten Caboto o laquoSevastiaacuten Cavotoraquo estaba casado con Juana Cavoto vecina que fue de la ciudad de Londres en la parroquia de San Gil (AHPS Libro del antildeo 1514 Oficio I Libro II Escribaniacutea Mateo de la Cuadra Folio 253 Fecha 14 de Septiembre) citado en CFAAPS Vol 3 doc 128 p 37

149ESPANtildeOLAS DE ULTRAMAR EN LA HISTORIA Y EN LA LITERATURA

la presuncioacuten de que la lujuria provocaba que el cerebro emitiese un liacutequido que iba al estoacutemago enfriaacutendolo y debilitaacutendolo interrumpiendo de esta manera las funciones vitales (Perry 58)

Se sabe que en la eacutepoca de Isabel la Catoacutelica habiacutea muchas mujeres estudiantes y que la propia reina las impulsaba a estos menesteres iniciativa que obtuvo sus frutos en las deacutecadas siguientes Ademaacutes de las conocidas novelistas Mariacutea de Zayas y Sotomayor y dontildea Mariana de Carvajal existioacute toda una serie de escritoras de todos los geacuteneros lite-rarios que florecieron a ambos lados del Atlaacutentico y que no solamente llaman la aten-cioacuten por su nuacutemero sino por la calidad de sus obras Algunas de ellas como dontildea Luisa de Padilla condesa de Aranda calificada por Serrano y Sanz como laquola maacutes notable de cuantas florecieron en Espantildea en el siglo XVIIraquo personificaraacuten a la perfeccioacuten a este tipo de mujeres Tambieacuten deberiacuteamos saber cuaacutentas seriacutean las mujeres que escribieron con pseudoacutenimos masculinos

La informacioacuten sobre las diferentes facetas de la vida femenil con que contamos no es abundante A pesar de todo podemos hacernos una idea maacutes clara de la verdadera situacioacuten de la mujer a traveacutes de una nueva interpretacioacuten de los textos tanto de los medievales como de las croacutenicas de los primeros antildeos del descubrimiento y conquista Algunos estudios relativamente recientes surgidos por el intereacutes general que suscita todo lo concerniente a la mujer han ayudado a considerar nuevas perspectivas La eru-dicioacuten moderna estaacute poniendo en tela de jucio los estereotipos tradicionales en cuanto a la pasividad y relevancia femeninas asiacute como al tradicional misogenismo que se atri-buye a la eacutepoca medieval Cada vez estaacute maacutes claro que la existencia de estas mujeres variaba considerablemente seguacuten la eacutepoca posicioacuten social o situacioacuten geograacutefica por lo que hacer valoraciones categoacutericas sobre laquola situacioacuten de la mujerraquo puede llevar a graves equivocaciones (Dillard 9) Es fundamental para comprender a la mujer espa-ntildeola que pasoacute al Nuevo Mundo tener en cuenta las enormes diferencias de todo tipo que existieron en la sociedad castellana y novomundista Un pintoresco ejemplo es el de laquolas tapadasraquo una usanza de origen aacuterabe que se pondriacutea de moda en Castilla poco despueacutes de la toma de Granada por los Reyes Catoacutelicos y que despueacutes pasariacutea al Peruacute Esta tradicioacuten ha perdurado en algunos pueblos de Espantildea hasta relativamente poco tiempo pueblos como Mojaacutecar (Almeriacutea) y Vejer de la Frontera (Caacutediz) son ejemplo de esta costumbre tambieacuten conocida como el de las laquocobijaacutesraquo

Tras la caiacuteda del reino musulmaacuten de Granada en 1492 la corona espa-ntildeola prohibioacute a las mujeres aacuterabes de Andaluciacutea vestir los velos islaacutemi-cos que cubriacutean sus rostros y ocultaban su identidad No era faacutecil des-arraigar esta costumbre tan ancestral y secular y el emperador Carlos asiacute como su hijo el rey Felipe II tuvieron que repetir la prohibicioacuten Cuando finalmente las moras fueron obligadas a abandonar sus velos y a adoptar el chal castellano comenzaron a utilizar la nueva prenda para cubrir sus rostros dejando al descubierto soacutelo uno de los ojos Esta nueva moda en el uso del chal tradicional nos asegura leoacuten Pi-nelo era extremadamente graciosa sensual y atractiva a causa de la belleza exoacutetica de los ojos de las moras Las mujeres cristianas de Granada Coacuterdoba y Sevilla imitaron pronto la nueva moda de llevar el chal y asiacute nacioacute la laquotapadaraquo hispana Desde Sevilla la nueva moda

150 JUAN FRANCISCO MAURA

fue a las colonias de ultramar y tomoacute raices especialmente en el Peruacute (Martiacuten 317-18)

En un reciente estudio sobre la educacioacuten de la mujer en la Ameacuterica virreinal apare-cen algunos ejemplos significativos de mujeres espantildeolas que consagraron gran parte de sus vidas a la tarea docente Dentro del proceso educativo de las espantildeolas que fueron a las Indias destaca el papel de dontildea Catalina de Bustamante Joseacute de Jesuacutes Vega y Ma-riacutea Luisa Caacuterdenas de Vega dicen en su obra Ameacuterica Virreinal La Educacioacuten de la mujer que esta mujer pocos antildeos despueacutes del descubrimiento del Nuevo Mundo se dedicoacute a trabajar en favor de los indios aunque por desgracia su nombre y sus hechos en la labor docente hayan sido ignorados por los historiadores modernos (Vega 12-13)

Son varias las veces que se nombra a Catalina de Bustamante en el citado estudio y varias las fuentes antiguas en que se recoge la presencia de tan distinguida laquomatrona muy honrada y de buen ejemploraquo de la que ya hablaba Zumaacuterraga y sobre la que se hizo un informe enviado a Carlos V describiendo sus actividades en la Nueva Espantildea firmado por cuatro de los misioneros maacutes conocidos de Meacutexico

El informe dice que los franciscanos de Texcoco acababan de cons-truir un nuevo monasterio y cedido el antiguo A una honrada y honesta y muy virtuosa matrona que se dice Catalina de Bustamante para que ende instruyese a las hijas de los sentildeores de la comarcala cual con el favor de Dios y limosnas que don Hernando [Corteacutes] les haciacutea para su sustentacioacuten [teniacutea en esa casa-hogar] hasta trescientas mujeres antes maacutes que menos (Vega 14)

Estas laquocasas-hogarraquo no estaban regentadas necesariamente por monjas sino por lo que llamaban laquobeatasraquo mujeres que sin estar estar sujetas a la autoridad eclesiaacutestica se dedicaban a un laquolucro honestoraquo Llamadas tambieacuten laquobeateriosraquo eran diferentes a los conventos de monjas y constituiacutean las primeras escuelas de la mujer en la Nueva Espa-ntildea (Vega 20-21) Fue gracias al ejemplo de mujeres como Catalina de Bustamante que dedicaron sus vidas a la educacioacuten de los indiacutegenas que existiesen otras continuando su ejemplo Motoliniacutea dice claramente que laquode ese primer encerramiento (el de Texcoco regentado por Catalina) salieron otras honestas y muy virtuosas duentildeas que ensentildeaban a las maacutes menudasraquo (Vega 23)

Pero dontildea Catalina de Bustamante pese a ser una singular mujer y la iniciadora de la educacioacuten de la mujer en Meacutexico no fue un caso aislado corresponde maacutes bien a un patroacuten al que se ajustaron muchas de las pioneras de la Nueva Espantildea que sembraron instituciones de educacioacuten de la mujer En 1530 unos antildeos maacutes tarde aparecioacute una de las grandes protectoras de la instruccioacuten femenina en Ameacuterica La emperatriz Isabel de Portugal (Vega 24)

Desde comienzos de la conquista fueron varios los centros docentes regentados por mujeres en los que la ensentildeanza no estaba impartida por monjas Una de las institucio-nes maacutes sobresalientes del sistema educativo fue el Colegio de Nintildeas que se establecioacute en la ciudad de Meacutexico a principios del siglo XVI con maestras que no eran monjas Estas seglares conocidas comunmente como laquomigasraquo eran las descendientes de las antiguas beatas Su ubicacioacuten permanente fue determinada en 1548 lugar que serviriacutea de escue-la ininterrumpidamente hasta 1862 cuando el edificio fue convertido en bodega (Vega 60) No se debe perder de vista que no soacutelo por el hecho de llevar una vida secular se

151ESPANtildeOLAS DE ULTRAMAR EN LA HISTORIA Y EN LA LITERATURA

gozaba de maacutes privilegios Era maacutes bien al contrario En las carreteras las mujeres segla-res no inspiraban el mismo respeto que las monjas que ademaacutes teniacutean contacto cons-tante con personas de los dos sexos no pertenecientes a la Iglesia (Arenal 297) Ademaacutes dentro de las murallas del convento desapareciacutean muchas de las barreras sociales que limitaban a la mujer de esta eacutepoca

La presencia femenina y la monarquiacutea

Pues iquestcoacutemo sabes tuacute preguntoacute don Quijote que los grandes llevan detraacutes de siacute a sus caballerizos Yo seacute lo direacute respondioacute Sancho Los antildeos pasados es-tuve un mes en la corte y alliacute vi que paseaacutendose un se-ntildeor muy pequentildeo que deciacutean que era muy grande un hombre le seguiacutea a caballo a todas las vueltas que daba que no pareciacutea que era su rabo Pregunteacute que coacutemo aquel hombre no se juntaba con el otro sino que siempre anda-ba tras deacutel Respondieacuterome que era su caballerizo y que era uso de grandes llevar tras siacute a los tales Desde enton-ces lo seacute tan bien que nunca se me ha olvidado (Cervan-tes Don Quijote)

Los monarcas espantildeoles fueron conscientes de que sin la presencia femenina difiacute-cilmente se podriacutea solidificar una conquista a todos los niveles La mayor parte de los virreyes y altos cargos trajeron a sus mujeres con ellos y en las ciudades principales de Hispano-Ameacuterica como la ciudad de Meacutexico Guatemala Lima o Potosiacute habiacutea mujeres que disfrutaban de una esmerada educacioacuten (gramaacutetica latiacuten poesiacutea historia muacutesica) Esto dariacutea origen a una elegante y hasta cierto punto sofisticada sociedad en la que las mujeres tomaron parte en asuntos maacutes importantes que los que sus homoacutelogas toma-ran en las colonias portuguesas laquoThere were brilliant vice-regal courts at Mexico City and Lima far exceeding anything that could be found in Portuguese or English America during the seventeenth centuryraquo (Boxer 39) Las estadiacutesticas con las que contamos hoy no soacutelo demuestran que las mujeres llegaron al Nuevo Mundo en respetables porcen-tajes sino que ademaacutes tuvieron una participacioacuten activa llegando a intervenir en algu-nos casos en las liacuteneas de vanguardia Resulta difiacutecil aproximarse al estado de aacutenimo de aquellas mujeres que vivieron en eacutepocas tan lejanas Para ello es necesario indagar en los documentos de la eacutepoca para lograr rescatar del pasado todos esos tesoros de la historia muchas veces tergiversados y manipulados con el fin de que sirvan a propoacutesi-tos actuales Es en los viejos manuscritos donde queda testimoniada su presencia tan rica en dolores tragedias y por queacute no en amores Fue la llegada de estas mujeres una brisa de esperanza y de ilusioacuten para aquellos que ya estaban en las tierras de ultramar y

152 JUAN FRANCISCO MAURA

veiacutean venir de su propia tierra aquello que maacutes antildeoraban amantes madres hermanas Un haacutelito de vida y poesiacutea que suavizaba las costumbres de estos rudos y romaacutenticos pioneros laquoporque para ser hombres de tales empresas algo de romaacutentico debioacute de existir en ellos y que es tan propio del espantildeol y abandonariacutean en brazos tan gentiles sus bruscos modales que habiacutean adquirido en aacutespero contacto en selvas y montantildeasraquo (Villafantildee 125)

Hoy sabemos que en la normativa oficial de la Espantildea del siglo XVI y XVII se favoreciacutea el paso de mujeres al Nuevo Mundo Afirmar lo contrario no solamente es falso sino que implica un desconocimiento total de los primeros dos siglos de la colonizacioacuten espantildeola La presencia de estas mujeres espantildeolas fue efectiva laquolas disposiciones al respecto demuestran claramente que se teniacutea especial intereacutes en su arraigo y que se tra-taba de defender su posicioacuten de mujeres casadas con conquistadores y colonizadoresraquo (Villafantildee 126) Los monarcas comprendiacutean que era praacutecticamente imposible que los hombres viviesen sin mujeres y que de ser asiacute era de esperar que se cometiesen abusos con las indias lo que incidiriacutea en la moral social y en el buen gobierno de la colonia Ademaacutes sin un asentamiento definitivo con hogares y familias difiacutecilmente se podriacutea llevar a cabo una presencia permanente en las nuevas colonias (Orsquo Sullivan-Beare 45)

Empezando por los Reyes Catoacutelicos la preocupacioacuten de que en las colonias se esta-bleciesen nuacutecleos que tuviesen como base la familia cristiana fue clara Las capitulacio-nes que a este efecto se hicieron entre los conquistadores y la Corona fueron nume-rosas La efectuada entre Rodrigo de Baacutestidas y Carlos V puede ser un buen ejemplo Fechada en Valladolid el 6 de noviembre de 1524 muestra el propoacutesito de Baacutestidas de establecer una colonia permanente en la desembocadura del riacuteo Magdalena en el terri-torio que hoy vendriacutea a corresponder a Colombia El documento firmado por el Empe-rador comienza asiacute

El Rey Por cuanto por parte de vos Rodrigo de Baacutestidas vecino de la ciudad de Santo Domingo de la Isla Espantildeola Me fueacute fecha relacioacuten que por servicio de la Catholica Reyna Mi Sentildeora e Nuestro os ofre-ceacuteis de poblar e poblariades la provincia e puerto de Santa Marta que en Castilla de Oro llamada la Tierra Firme e que la poblariades dentro de dos antildeos siguientes haciendo en ella un pueblo en que no menos haya en eacutel al presente cincuenta vezinos que los quince de ellos sean casados y tengan consigo a sus mujeres y que lo teniades fecho dentro de dos antildeos y de hoy en adelante lo maacutes que fuese posible asiacute de cris-tianos espantildeoles como de indios (Restrepo 1 30)

De igual manera el priacutencipe Felipe (futuro Felipe II) en las capitulaciones establecidas en 1547 con Juan de Sanabria para que eacuteste fuese como gobernador y capitaacuten general de la dicha provincia escribe lo siguiente laquoPrimeramente que seais obligado e os obligeis a llevar destos Reynos de Castilla a la dicha provincia del Rio de la Plata cien casados con sus mujeres e hijos para poblar la dicha provincia y con ellos llevareis a vuestra muger e hijos (CDI de Ameacuterica y Oceaniacutea 23 119)

En numerosas ocasiones se pone de manifiesto el apoyo de la monarquiacutea a la emigra-cioacuten femenina tantas que difiacutecilmente se podriacutean enumerar todos los casos Lo cierto es que la legislatura vigente favoreciacutea la emigracioacuten y traslado de mujeres con toda una se-

153ESPANtildeOLAS DE ULTRAMAR EN LA HISTORIA Y EN LA LITERATURA

rie de alicientes137 sobre todo si eacutestas estaban casadas pasaje para llevar a las familias franquicia de derecho para los artiacuteculos que portasen consigo favoritismo en cargos destinos y contrataciones a aquellos que pasasen con sus mujeres incluyendo ademaacutes de los castellanos y leoneses a suacutebditos de otras partes de la corona incluso genoveses y portugueses si estos veniacutean acompantildeados de sus consortes (Fernaacutendez Duro 15-16)

Incluso se llegoacute a imponer penas a aquellos hombres casados que no llevasen a sus mujeres con ellos a Indias en el teacutermino de un antildeo El mismo emperador en una ceacutedula otorgada al virrey de la Nueva Espantildea le recomendaba que laquoprocurase persuadir a ca-sarse a los solteros que estuviesen en edad y situacioacuten de hacerloraquo prometieacutendoles que al efectuar el matrimonio seriacutean preferidos en el reparto de indios En la isla de San Juan de Puerto Rico los cargos oficiales y oficios puacuteblicos debiacutean de ser desempentildeados por los casados en primer lugar En Meacutexico ocurrioacute lo mismo con los cargos de corregido-res (Konetzke laquoemigracioacutenraquo 140-41) Felipe II al igual que sus antecesores y sucesores reiteraraacute y justificaraacute los beneficios de los que seraacuten acreedores aquellos que tengan allaacute a sus mujeres laquoque los que han servido en los descubrimientos de las dichas Indias y tambieacuten los que ayudan a la poblacioacuten dellas que tienen allaacute sus mugeres sean preferi-dos en los aprouechamientos qualesquierraquo mandando que despueacutes de los conquistado-res se tuviera en cuenta para la laquoprovisioacuten de los corregimientosraquo a los colonos casados siempre que estuvieran capacitados para dichos cargos (Konetzke laquoemigracioacutenraquo 141)

Las disposiciones en favor del matrimonio son claras ya sea por medio de un favo-ritismo manifiesto como en los casos antes citados o mediante medidas de cohercioacuten para que esta poliacutetica se llevase a cabo Don Sebastiaacuten Ramiacuterez de Fuenleal obispo de Santo Domingo y presidente de la Audiencia de Meacutexico propuso que a aquellos enco-menderos que no estuviesen casados y que no hubiesen tomado parte en la conquista se les quitase los indios concedidos con la obligacioacuten de devolveacuterselos si en el plazo de un antildeo habiacutean contraiacutedo matrimonio (Konetzke laquoemigracioacutenraquo 142-43) Por supuesto hubo excepciones a estas reglas En algunos casos ni la mujer teniacutea especial intereacutes en vivir junto con su marido en las Ameacutericas ni el marido queriacutea ir a buscar a su mujer pasado el plazo de un antildeo En el presente documento y de forma excepcional las auto-ridades reales protegen a los conyuges para que puedan seguir viviendo separados en continentes diferentes

Nuestras justicias de la ysla de Cubagua e otras qualesquier de las nuestras Yndias yslas e tierra firme del mar oceacuteano e a cada uno e qualquier de vos a quieacuten esta mi ceacutedula fuese mostrada por parte de Alonso de Tapia nuestro veedor de la provincia de Paria me ha sido hecha relacioacuten que ha mucho tiempo que reside en esas partes donde nos ha servido en lo que se ha ofrecido e que agora vos otros le apre-miaacuteis a que venga o embiacutee a estos Reinos por su muger lo cual no puede al presente hazer a causa de no ter posibilidad para ello a mi me ha suplicado vos mandase que no le compeliacuteesedes ny apremiaacutesedes a que viniese o enviase por la dicha su muger y dieacutesedes por libres los fiadores que tenyades para que dentro de un antildeo embiariacutea o verniacutea por

137 Reales Ceacutedulas de los antildeos 1502 y 1503 Academia de la Historia Coleccioacuten Muntildeoz tomo 75 fols 209 y 220 citado por Fernaacutendez Duro 15

154 JUAN FRANCISCO MAURA

ella o como la mi merced fuese lo cual visto por los de nuestro consejo juntamente con una peticioacuten presentada por dontildea Mariacutea Gudiel muger del dicho Alonso de Tapia por la cual nos suplica lo mismo que acor-dado que debiacutea mandar esta mi ceacutedula para vos por la qual vos mando que no compelaacuteis ni apremieacuteis al dicho Alonso de Tapia a que venga ni enviacutee a estos reinos por la dicha su muger si no fuere a que la pro-vea de lo que fuere necesario para su mantenimiento y deys por libres quales quier fianzas que sobre ello haya dado e no fagades ende al por alguna manera Firmado en la villa de Valladolid a VII diacuteas del mes de febrero de mil e quinientos e treinta y siete antildeos yo el licenciado Con-de de Samano y sentildealada del cardenal Beltraacuten y Carbajal [Aparte en letra pequentildea] Este diacutea se despachoacute una provisioacuten por la cuaacutel su Mag hizo merced a Alonso de Tapia de la veedoriacutea de la provincia de Paria por muerte de Garciacutea de Aguilar con las clausulas ordinarias y con el mismo salario que teniacutea Aguilar Firmado del emperador y de Beltraacuten y Bernal y Velaacutezquez El Rey (Registro de disposiciones Riacuteo Marantildeoacuten AGI Indiferente General Legajo 416 libro 2 Fols 94v y 95r)

El punto maacutes interesante a destacar de todas estas disposiciones oficiales en cuanto a la emigracioacuten femenina al Nuevo Mundo no es otro que la libertad que se da a la mujer de decidir si quiere o no casada o sin casar trasladarse al nuevo continente no como una imposicioacuten sino como un precepto laquoel espiacuteritu de las disposiciones en el sentido de asegurar la vida marital de los casados significa que la mujer que su marido invita a pa-sar a las Indias puede negarseraquo (Villafantildee 127) Habriacutea que ver las opciones laquorealesraquo ade-maacutes de las legales y econoacutemicas que le quedaban a la mujer si tomaba esta decisioacuten

El saber la libertad de eleccioacuten que estas mujeres teniacutean de antemano antes de aden-trarse en las interminables penalidades y aventuras que los viajes de la navegacioacuten tran-soceaacutenica suponiacutean hace que sus hechos y esfuerzos cobren auacuten maacutes relieve En nume-rosas ocasiones estas mujeres cruzaron el oceacuteano una y maacutes veces sin otro motivo que el de defender los derechos e intereses de los suyos Lo que resulta maacutes valioso de todo esto es que lo hicieran por propia iniciativa arriesgando sus vidas para que se hiciese justicia y para que no les faltase lo necesario a aquellos que estaban en la otra orilla Las autoridades vigentes conocedoras de los vaciacuteos legales existentes en las nuevas colo-nias se apresuraron a poner en vigor aquellas normas que redundaran en el beneficio de los menos favorecidos por las circunstancias La institucioacuten del matrimonio cuya trans-cendencia es fundamental en la vida juriacutedica y social de la mujer tuvo que ser legislada en Ameacuterica con una serie de nuevas disposiciones agregados modificaciones y aclara-ciones Asiacute pues la legislacioacuten de base espantildeola tuvo que sufrir en tierras americanas esta serie de cambios por motivos poliacuteticos y sociales (Villafantildee 126)

Para hacer un sumario de lo dispuesto hasta el siglo XVI en cuanto a la legislacioacuten de las mujeres que teniacutean familia o intereses en Indias merece la pena mencionar que existieron una serie de disposiciones que protegiacutean a las mujeres para que eacutestas no se viesen abandonadas por sus maridos En un epiacutegrafe de la Recopilacioacuten de 1680 (libro VII tiacutetulo 3) se deja ver claramente la preocupacioacuten de las autoridades en este asunto laquoDe los casados en Espantildea e Indias que estaacuten ausentes de sus mujeres y esposasraquo (Vi-llafantildee 126-27)

155ESPANtildeOLAS DE ULTRAMAR EN LA HISTORIA Y EN LA LITERATURA

La lista de disposiciones se hace interminable En los reinados de Fernando el Catoacute-lico Carlos V Felipe II Felipe III o incluso Carlos II la insistencia es constante La ra-zoacuten de esta insistencia seriacutea bastante obvia dado que con un oceacuteano por medio seriacutean muchos los que se aprovechasen de llevar una doble vida marital sin el estricto control y vigilancia de sus mujeres que se encontraban en la peniacutensula La ley XXVII libro IX tiacutetulo XXVI determina laquoDeclaramos por personas prohibidas para embarcarse y pasar a las Indias todos los casados y desposados en estos reinos lsquosino llevaren con ellos sus mujeresrsquo aunque sean virreyes oidores gobernadores o nos fuesen a servir en cual-quier cargo y oficios de Guerra Justicia y Hacienda porque es nuestra voluntad que todos los susodichos lleven a sus mujeresraquo (Villafantildee 127) laquoLos eclesiaacutesticos eran los en-cargados de dar cuenta a los tribunales competentes de aquellos que estando casados permaneciacutean en Indias sin sus mujeres Son reiteradas las disposiciones de Fernando el Catoacutelico en este sentidoraquo138 En 1514 el rey don Fernando ordena en una provisioacuten para la isla Espantildeola laquodoy licencia eacute facultad aacute cualquier persona naturales de estos Reynos para libremente se puedan casar con mujeres naturales de esa dicha ysla sin tener que incurrir por ello en pena algunaraquo (Villafantildee 129)

No se debe olvidar tampoco a aquellas mujeres que decidieron pasar a las laquonuevas tierrasraquo solteras Estas mujeres tambieacuten tuvieron un papel importante en el desarrollo de las nuevas colonias Los organismos espantildeoles del momento como los mandatarios indianos y todos los cronistas no dejaron pasar desapercibida la importancia social de estas mujeres en la poliacutetica de poblamiento laquo[E]s cierto que los pueblos de Indias nuevamente poblados no se tienen por fijos o estables ni permanentes hasta tanto que mujeres espantildeolas entren en ellos y los encomenderos y conquistadores se casen por muchas causas y respetos buenos y saludables que para ello hayraquo (Villafantildee 126-27)

Si la intencioacuten era la de una presencia permanente en las tierras americanas la mujer soltera que pasase a ellas siempre seriacutea un motivo maacutes para el colono o conquistador de continuar en el mismo suelo Se podriacutea empezar una familia si asiacute se quisiese sin tener que pensar en volver a la metroacutepoli ya fuese a disfrutar de los bienes adquiridos o a laquobuscarraquo una esposa El problema aparecioacute cuando se produjo un exceso de mujeres solteras lo que de alguna manera alteroacute la estructura social existente ya que no habiacutea muchas opciones para ellas aparte del matrimonio o el convento

En consideracioacuten a que la experiencia habiacutea demostrado que un exce-sivo nuacutemero de mujeres ejerciacutea perniciosa influencia sobre la moral y las costumbres se suplicaba al rey no otorgase a aquellas tantas auto-rizaciones para emigrar al Peruacute La ciudad de la Plata fundada en 1538 emite en 1577 un informe en el que se expone la urgente necesidad de que se funde un convento de monjas pues en el territorio de las Au-diencias de Los Charcas existiacutea un gran nuacutemero de muchachas que no pudieacutendose casar se hallaban en gran peligro de perderse (Konetzke laquoemigracioacutenraquo 149)

138 Solorzano Pereira Juan de Libro Primero de la Recopilacioacuten de las Ceacutedulas Reales Cartas y Provisiones y Or-denanzas Reales Noticia preliminar de Ricardo Levenne Universidad de Buenos Aires Facultad de Derecho Y Ciencias Sociales Pub del Instituto de Historia del Derecho Argentino Coleccioacuten de Textos y Documentos para la Historia del Derecho Argentino t V Buenos Aires Imp de la Universidad de Buenos Aires 1945 (Li-bro I Ley 10 laquoQue los Espantildeoles puedan casar con Indias y al contrario a su voluntadraquo t2 p 138 citado en Villafantildee 129

156 JUAN FRANCISCO MAURA

Entristece ver coacutemo se manejan las cifras de estas mujeres como si de ganado o de bienes suntuarios se tratase Por otra parte existieron irregularidades como la de pobla-doras espantildeolas que vivieron amancebadas con hombres que ya estaban casados en la peniacutensula Normalmente esto ocurriacutea cuando la estancia del conquistador se prolonga-ba maacutes de lo debido en lugares donde habiacutea pocas espantildeolas Muchas veces nacieron hijos de estas uniones que hicieron auacuten maacutes difiacutecil la situacioacuten para las mujeres que esperaban en Espantildea a un marido que ya no teniacutea ningunas intenciones de volver En los juicios de residencia los documentos acostumbran a citar estos casos ya que era parte de su obligacioacuten castigar las irregularidades extramatrimoniales y salvaguardar las buenas costumbres familiares que con tanto intereacutes se deseaba mantener laquoUn ejemplo nos lo da la isla de Cuba donde en 1532 viven con hombres casados Olalla Hernaacuten-dez Santillana Aranda lsquola Cordobesarsquo Catalina de Leoacuten Catalina Saacutenchez Francisca Hernaacutendez Mayor de Azebedo Juana de Valeros y lsquouna mujer que estaba en casa de Ayalarsquoraquo (Borges 416)

Estos casos no fueron aislados y mucho menos en Cuba centro neuraacutelgico de todo el movimiento de ida y vuelta entre la metroacutepoli y el Nuevo Mundo Estas ocho acusa-ciones por lo tanto no tienen porqueacute considerarse extraordinarias y menos en el lugar maacutes cosmopolita de las Indias en esos momentos al que llegaban flotas a cada momen-to Al parecer existieron casos parecidos en el Riacuteo de la Plata Peruacute y Nueva Espantildea (Ratcliffe 347) El margen legal para que estas mujeres viviesen como quisiesen estuvo limitado por una moral que veiacutea uacutenicamente en el matrimonio o el convento una salida laquovaacutelidaraquo para que fueran aceptadas socialmente Los hombres en iguales circunstan-cias fueron juzgados por una laquomoralraquo mucho maacutes permisiva

La mujer y el cuerpo eclesiaacutestico

Pues iquestquieacuten diablos os traiacutedo aquiacute dijo don Quijote siendo hombre de la iglesia iquestQuieacuten sentildeor replicoacute el caiacutedo laquomi desventuraraquo Pues otra mayor os amenaza dijo don Quijote sino me satisfaceacuteis a todo cuanto primero os pregunteacute (Cervantes Don Quijote )

Otro factor a tener en cuenta en un anaacutelisis sobre la presencia de la mujer en el Nuevo Mundo es el que tiene que ver con la institucioacuten maacutes importante de las que llegaron desde Europa la iglesia catoacutelica Sin aacutenimo de criticar a tan compleja institucioacuten res-ponsable de gran parte de los aconteceres en el Nuevo Mundo vale la pena analizar algunas singularidades Muchos de sus miembros fueron grandes ejemplos de valor e inteligencia a la hora de tratar los maacutes variados y escabrosos asuntos con los que se encontraron los cristianos en la otra orilla durante este periacuteodo Se debe resaltar tam-

157ESPANtildeOLAS DE ULTRAMAR EN LA HISTORIA Y EN LA LITERATURA

bieacuten su caraacutecter medieval en la manera de hacer apostolado y de entender y tratar a los potenciales cristianos Si se tienen en cuenta los privilegios y prerrogativas que algunas de las altas jerarquiacuteas eclesiaacutesticas tuvieron no seriacutea superfluo estimar que un respeta-ble porcentaje de la poblacioacuten de origen laquodudosoraquo muy bien podiacutea venir de la misma iglesia Fueron muchas las viacutectimas y muchas las familias divididas por un padre laquoinvi-sibleraquo Gran parte de los hijos o laquosobrinosraquo de estos sacerdotes pasaron a ocupar cargos similares incluyendo los privilegios que estos cargos llevaban consigo como si se trata-se de cualquier otro oficio gremial transmitido generacionalmente regla tan comuacuten en la Europa medieval Todaviacutea a finales del siglo XIII en Espantildea los derechos de los hijos y nietos de los sacerdotes estaban protegidos por la ley sin que hubiesen podido ser erradicados por las reformas gregorianas (Ratcliffe 347)139

Las letras espantildeolas ya se haciacutean eco de estos lances amorosos entre representantes de la Iglesia y ciertas damas del lugar desde los tiempos del poeta riojano Gonzalo de Berceo En su obra maacutes conocida Los milagros de Nuestra Sentildeora Berceo describe con un realismo ingenuo y sencillo relatos de humor y de humanismo sobre aquellos hombres de carne y hueso que eran perdonados por la intercesioacuten de la Virgen Mariacutea Juan Ruiz por su lado haraacute de su Libro de buen amor la obra maacutes representativa en este sentido Seriacutea prolijo recordar la actuacioacuten de la Iglesia durante diversos periacuteodos de la Edad Media no soacutelo en Espantildea sino en toda Europa En la Espantildea musulmana del siglo XII concretamente en Sevilla el comportamiento de los representantes de la iglesia cristia-na (mozaacuterabe) en territorio islaacutemico es duramente criticado por el sevillano Ibn Abdun Este precioso documento muestra el estricto control y falta de confianza que existiacutea sobre la mujer prohibieacutendolas que entrasen en las laquoabominablesraquo iglesias cristianas

porque los cleacuterigos [cristianos] son libertinos fornicadores y sodomi-tas Asimismo debe prohibirse a las mujeres francas que entren en la iglesia maacutes que en diacuteas de funcioacuten o fiesta porque alliacute comen beben y fornican con los cleacuterigos y no hay uno de ellos que no tenga dos o maacutes de estas mujeres con que acostarse Han tomado esta costumbre por haber declarado iliacutecito lo liacutecito y viceversa Convendriacutea pues mandar a los cleacuterigos que se casasen como ocurre en Oriente y que si quie-ren lo hagan (Leacutevi-Provenccedilal 150)

Pese a existir una convivencia paciacutefica durante gran parte de la Edad Media entre los tres credos monoteiacutestas de Espantildea (cristianos musulmanes y judiacuteos) esto no suponiacutea que no existiese desprecio y desconfianza entre estos grupos religiosos Dice Abdun resaltando el peligro que suponiacutea que una mujer entrase en casa de un cleacuterigo cristiano de vida ceacutelibe

No debe tolerarse que haya mujer sea vieja o no en casa de un cleacuterigo mientras eacuteste rehuacutese casarse Obliacutegueseles ademaacutes a circuncidarse co-mo les obligoacute al-Mutadid pues si a lo que dicen siguen el ejemplo de Jesuacutes (iexclDios les bendiga y salve) Jesuacutes se circuncidoacute y precisamente ellos que han abandonado esta praacutectica tienen una fiesta que celebran solemnemente el diacutea de su circuncisioacuten (Leacutevi-Provenccedilal 150-151)

139 Valdriacutea la pena ver si han cambiado mucho las cosas desde hace quinientos antildeos a esta parte o si in-cluso la iglesia moderna ha retrocedido en tolerancia en cuanto a las relaciones sexuales de los representantes de la Iglesia

158 JUAN FRANCISCO MAURA

El historiador argentino Germaacuten Arciniegas recoge un pasaje ilustrativo de lo men-cionado anteriormente pero trasladado al ambiente de la colonia diciendo que incluso en poblaciones pequentildeas como Santa Fe con poco maacutes de un convento y una ermita la fragilidad de la carne enredaba a frailes soldados y virreyes por igual laquoEl buen So-liacutes que murioacute en olor de santidad con la cabeza reclinada sobre un par de ladrillos y en saya de franciscano cruzaba en las noches el solar de su palacio para ir a besar a la Marichuelaraquo (118-19)

Arciniegas recoge tambieacuten un suceso aparecido en el diario de Lima en 1667 que no tuvo que ser extraordinario durante los primeros antildeos de la colonia laquoEl fraile carmelita mdashGrande hereje y siendo sacerdote deciacutea misa gran perro lujurioso deshonesto que relatando sus maldades dijo que en cierta ciudad habiacutea conocido carnalmente a maacutes de trescientas y sesenta mujeres y en un convento de monjas habiacutea cometido muchos sacrilegios Este lo trujeron preso de Buenos Aires por Chileraquo (119)

Las controversias de la iglesia moderna sobre las relaciones que los eclesiaacutesticos de-ben tener con el sexo femenino parece que no han encontrado todaviacutea respuesta Sigue existiendo miedo y recelo a que la mujer comparta no soacutelo poder en la jerarquiacutea de la iglesiacutea sino en la vida privada de los miembros de la institucioacuten En la Nueva Espantildea el primer obispo de Meacutexico Juan de Zumaacuterraga viendo en la mujer un ser de tentacioacuten irresistible prohibioacute terminantemente la presencia de eacutestas en su casa Ni siquiera para su limpieza y aseo El franciscano Juan de Torquemada se refiere a este comportamien-to como una de las virtudes del popular obispo

Fue este benditiacutesimo prelado muy amigo de la virtud y de virtuosos y aceacuterrimo reprehendedor de vicios y viciosos y tan enemigo de la ociosidad que no permitiriacutea que alguno de su casa estuviese ocioso fue amiciacutesimo de la limpieza por lo cual jamaacutes consintioacute que mujer alguna entrase en su casa aunque fuese necesaria al servicio de ella ni nunca consintioacute que por alguna ocasioacuten subiese mujer a lo alto y aposentos de ella antes lo teniacutea todo cerrado como un monasterio porque sabiacutea (como quien tambieacuten sabiacutea) que la ocasioacuten suele derribar los maacutes fuertes y robustos corazones (450 lib 20 cap 31)

No fueron uacutenicamente miembros de la iglesia catoacutelica los que valoraron la lucha con-tra la tentacioacuten siguiendo al pie de la letra el crudeliacutesimo refraacuten laquoentre santa y santo pared de cal y cantoraquo Se tienen algunas noticias de la vida social de los primeros tiem-pos de la colonia En estos documentos se puede observar coacutemo no distaban mucho las oacuterdenes que se dictaban en la metroacutepoli y las que se llevaban a cabo en la Nueva Espantildea La vida social tanto de damas como de algunos miembros de la iglesia de las colonias era maacutes laquorelajadaraquo de lo que las normas permitiacutean Gracias a la informacioacuten ofrecida por Manuel Romero de Terreros disponemos de los nombres de las primeras virreinas

Las esposas de los primeros cinco Virreyes Don Antonio de Mendoza Don Luis de Velasco Don Gastoacuten de Peralta Don Martiacuten Enriacutequez de Almanza y Don Lorenzo Suaacuterez de Mendoza Conde de la Coruntildea fueron respectivamente Dontildea Caterina de Vargas Dontildea Ana de Cas-tilla y Mendoza hija de Don Diego de Castilla Sentildeor de Gor y Caba-

159ESPANtildeOLAS DE ULTRAMAR EN LA HISTORIA Y EN LA LITERATURA

llerizo de Carlos V Dontildea Leonor de Vieo Dontildea Mariacutea Manrique hija del Marqueacutes de Aguilar y Dontildea Catalina de la Cerda hija del segundo Duque de Medinaceli (Romero 2)

Existen noticias concretas de la seacuteptima virreina de la Nueva Espantildea (1586) dontildea Blanca de Velasco marquesa de Villamanrique En ellas destaca lo anteriormente men-cionado sobre la falta de tolerancia existente en aquellos tiempos difiacutecilmente com-prensible si no fuera por fragmentos esporaacutedicos conservados sobre la vida colonial en la Nueva Espantildea En la siguiente Relacioacuten hecha por autores anoacutenimos sobre la visita que hizo Fray Alonso Ponce Comisario General de la Orden Seraacutefica a las provincias de la Nueva Espantildea se mencionan las eneacutergicas medidas que con los miembros de su orden en su opinioacuten de moral laquomuy relajadaraquo tomoacute este religioso Tambieacuten aparecen mencionadas sus relaciones con la Virreina

Captoacutese ademaacutes la enemistad del gobernante y de la Virreina Dontildea Blanca de Velasco hija del cuarto Conde de Nieva sentildeora seguacuten pare-ce de conducta ligera y caraacutecter maacutes que dominante laquoPor este mismo tiempo (septiembre de 1586) fueron el Virey y la Vireyna a holgarse y recrearse en la cibdad de Xochimilco Posoacute con toda su casa dentro de nuestro convento en un dormitorio deacutel y detuacutevose alliacute siete u ocho diacuteas en que los indios les hicieron grandes fiestas aunque les costaron caras porque en una dellas murieron dos o tres dellos con un tiro que se disparoacute y reventoacute y al principal indio de aquella cibdad hirieron muy malraquo (Romero 3-4)

A pesar del riacutegido control eclesiaacutestico y civil que habiacutea en la Nueva Espantildea existieron tambieacuten pareacutentesis en los que incluso miembros de la iglesia y mujeres mdashhumanos al fin y al cabomdash pudieron disfrutar de algunos momentos de regocijo y alegriacutea Con-tinuando con la cita anterior el mismo autor se queja del laquoexcesoraquo de libertad en los frailes que se suponiacutea que teniacutean que profesar una extremada pobreza y no digamos castidad En primer lugar se describen pormenorizadamente la abundancia en el tipo y cantidad de comida de toda clase dulces y vino que se consumieron con largueza y generosidad durante aquellas fiestas Pero lo que maacutes indigna al autor (o autores) fue que llegasen a entrar mujeres en el convento

y aunque todo esto es malo delante de Dios y delante de los hom-bres lo que maacutes mal parecioacute y de que todo el mundo tuvo que mur-murar fueacute la demasiada libertad rotura y disolucioacuten que hubo en en-trar y estar muy de propoacutesito mujeres no soacutelo la Vireyna y las suyas sino otras muchas dentro del dicho convento y andar por las celdas como si fuese cosa profana y como si no hubiera breve apostoacutelico que soacute graves penas y censuras prohibe estas entradas y como si a los frai-les no los comprendiera el dicho breve por admitirlas y no estuviera asiacute declarado y mandado por nuestros estatutos generales de Toledo (Romero 4-5)

La preocupacioacuten por las laquotentaciones de la carneraquo fuera del matrimonio siempre es-tuvo en la mente de los religiosos espantildeoles asiacute como de otras nacionalidades y reli-

160 JUAN FRANCISCO MAURA

giones que intentaban vanamente erradicar algo tan intriacutenseco al ser humano como a cualquier otra especie animal Esta preocupacioacuten se acentuoacute mucho maacutes en el Nuevo Mundo donde muchas sociedades tribales no veiacutean a la mujer como parte integrante de su propiedad privada La razoacuten es obviamente socioloacutegica y ha existido desde el principio de los tiempos en las civilizaciones maacutes primitivas laquoNo desearaacutes a la mujer del proacutejimoraquo El quebrantar este precepto equivaldriacutea a desestabilizar desde su base a la sociedad judeo-cristiana fundamentada en la familia Las penas aplicadas en estas transgresiones seraacuten lo suficientemente severas como para marginar socialmente mdashen el mejor de los casosmdash a aquellos que las pongan en praacutectica Siendo la mujer la encar-gada por la naturaleza de trasmitir la descendencia de la especie su libertad sexual se veraacute limitada por el peligro de quedar embarazada cada vez que ignore tal elemental precepto140

Primeras escritoras del Nuevo Mundo

Contra cuerdos y contra locos estaacute obligado cualquier caballero andante a volver por la honra de las mujeres cualesquiera que sean Cuanto maacutes por las reinas de tan alta guisa y pro como fue la reina Madaacutesima a quien yo tengo particular aficioacuten por sus buenas partes porque fuera de haber sido fermosa ademaacutes fue muy prudente y muy sufrida en sus calamidades que las tuvo muchas (Cervantes Don Quijote)

Fueron varias las escritoras que durante los siglos XVI y XVII tuvieron una relacioacuten di-recta o indirecta con el Nuevo Mundo Muchas de ellas eligieron la vida monaacutestica mdashen algunos casos como refugio huyendo de sus maridosmdash uacutenica salida en una estructura social en donde no eran muchas las opciones especialmente en una eacutepoca donde el fac-tor religioso pesaba casi tanto como el econoacutemico pero sobre todo para dedicarse a una vida espiritual difiacutecilmente alcanzable en otras circunstancias Mariloacute Vigil apunta que las monjas que lo eran por su propia voluntad ademaacutes de tener inquietudes religiosas tambieacuten las teniacutean intelectuales como es el caso de la escritora miacutestica espantildeola Santa Teresa de Jesuacutes (1515-1582) que ademaacutes de tener una de las vidas maacutes interesantes que se conozcan supo sacar tiempo para escribir las maacutes bellas manifestaciones de la poesiacutea liacuterica y sobre todo de la prosa castellana (Vigil 237-38) Cada una de estas mujeres de-dicadas a la vida literaria y espiritual de su tiempo se merece muchiacutesimo maacutes espacio del que se les pueda ofrecer en estas pocas liacuteneas No obstante con estas pasajeras men-

140 Aunque afortunadamente las cosas han cambiado para la mujer no se debe dejar de mencionar la can-tidad de abusos sexuales de la que es viacutectima en la sociedad moderna

161ESPANtildeOLAS DE ULTRAMAR EN LA HISTORIA Y EN LA LITERATURA

ciones se espera al menos incluirlas y poder despertar el suficiente intereacutes para que sus vidas y sus obras no sigan sumergidas en las simas del olvido Para que estas mujeres de la iglesia pudiesen satisfacer su curiosidad cognoscitiva era necesario romper todas aquellas barreras que supusiesen un estorbo o una restriccioacuten a la hora de investigar consultar o hablar con cualquier persona religiosa de cualquier orden o secular ya fue-se obispo o cleacuterigo Las posiciones intelectuales entre las diferentes oacuterdenes religiosas fueron muy dispares como bien es sabido No eran iguales los planteamientos teoloacute-gicos de los dominicos que los de los franciscanos o los de los carmelitas que los de los agustinos o jesuitas Era necesario por lo tanto tener acceso a estas fuentes de informa-cioacuten para poder constrastar las diferencias y hacer valoraciones propias (Vigil 237-38) El escritor espantildeol Caro Baroja destaca el caraacutecter enciclopeacutedico del catolicismo donde se han integrado corrientes y posturas muy dispares que a traveacutes del diaacutelogo daban cierto espacio al creyente con maacutes curiosidad intelectual para que este pudiese compa-rar y valorar las diferentes opciones que se le ofreciacutean (Vigil 237-38)

Varias de estas mujeres intelectuales fueron hijas de conquistadores que aunque na-cidas en suelo americano seguiacutean expresaacutendose en la lengua de sus padres con no me-nos fuerza que sus contemporaacuteneas peninsulares Es cierto que existieron numerosas escritoras en el Nuevo Mundo durante el siglo XVIII algunas dedicadas incluso al estudio de las matemaacuteticas como la mexicana Dontildea Francisca Gonzaga y Castillo Pero para limitar el presente trabajo a los siglos XVI y XVII uacutenicamente se incluiraacuten ejemplos de estos dos siglos

La peruana Josefa de Alarcoacuten publicoacute en 1648 unas liras dedicadas a las Exequias del Priacutencipe Baltasar Carlos

Cifro en capilla breveEl tribunal de la Magestad maacutes graveEn fe de lo que debeA Carlos que en dos mundos no cabe141

El caso de Sor Jeroacutenima de la Asuncioacuten es muy interesante una mujer que tuvo la oportunidad de viajar a Meacutexico y posteriormente a las Filipinas para cumplir con las mi-siones que le habiacutean sido encomendadas por su orden Nacida en Toledo en 1555 en el seno de una noble y acaudalada familia estuvo destinada a recorrer el mundo ofrecien-do sus servicios a todos los necesitados distinguieacutendose por su ardiente caridad laquovien-do que los galeotes eran tratados con dureza excesiva sobre todo cuando los llevaban de un pueblo a otro procuroacute aliviar las penas de aquellos desgraciados y lo consiguioacute en parteraquo (Serrano y Sanz 268 65) Hija del licenciado e ilustre jurista Pedro Garciacutea Yaacute-ntildeez y de dontildea Catalina de la Fuente ingresoacute contra su voluntad en el monasterio de las Clarisas de Santa Isabel de los Reyes (Toledo) el 5 de agosto de 1570 (Trevintildeo 46) hay que decir que eacutesta no seraacute la uacutenica voluntad contra la que tuvo que luchar

Sor Jeroacutenima se embarcoacute para Meacutexico y de alliacute partioacute hacia Manila junto con siete compantildeeras en el famoso laquoGaleoacuten de Manilaraquo que saliacutea anualmente del puerto mexi-cano de Acapulco Su viaje a las Filipinas duroacute un antildeo y tres meses desde su salida de Espantildea tiempo en el que demostroacute un gran valor y determinacioacuten por el soacutelo hecho de

141 Manuel Serrano y Sanz Apuntes para una biblioteca de escritoras espantildeolas desde el antildeo 1401 al 1833 vols 268 269 270 271 Biblioteca de Autores Espantildeoles (Madrid Atlas 1975) 268 19

162 JUAN FRANCISCO MAURA

embarcarse en tan precarias naves Fue la primera misionera de Oceaniacutea muriendo en Manila en 1621 Alliacute fundoacute el monasterio de Santa Clara que perviviriacutea hasta ser bom-bardeado en la Segunda Guerra Mundial (Trevintildeo 47) Escribioacute su Vida donde trata de la fundacioacuten del convento y de todas las tribulaciones mdashllegoacute a ser excomulgadamdash y satisfacciones que una vida dedicada a una causa justa proporciona Tambieacuten escribioacute una obra de caraacutecter filosoacutefico-teoloacutegico titulada Carta de marear en el mar del mundo nombre alegoacuterico que da cuenta de la enorme distancia recorrida a traveacutes del laquomar del espiacuterituraquo por sor Jeroacutenima He aquiacute algunos de sus versos de caraacutecter religioso

Vuestra soy para vos naciacuteiquestQueacute mandaacuteis hacer de miacute Inaccesible grandezaEterna Sabiduriacuteay bondad del alma miacuteaDios un ser poder y Altezamirad la suma pobrezade eacutesta que se ofrece aquiacuteiquestQueacute mandaacuteis hacer de miacute (Serrano y Sanz 268 66)

Ya en Meacutexico tenemos otro ejemplo de una mujer dedicada por completo a Dios y al estudio y composicioacuten de obras de caraacutecter teoloacutegico Dontildea Ana Mariacutea del Costa-do de Cristo nacida en la ciudad de Tlaxcala hacia el antildeo 1650 Tomoacute la orden de San Francisco para consagrarse a las labores de su orden y a la escritura Se dice que con los escritos de Dontildea Ana Mariacutea se podriacutean formar veinte tomos (Serrano y Sanz 268 282) Estas son algunas de sus obras Vida y muerte de Jesucristo Nuestro Sentildeor Vida del Seraacutefico Padre San Francisco de Asiacutes Vida de la iacutenclita Virgen Santa Clara Vida del sutiliacutesimo doctor Juan Duns Escoto

Pero no todas las monjas tuvieron vidas tan dedicadas al estudio y la oracioacuten Loacutegica-mente entre un nuacutemero tan grande de mujeres existioacute de todo y seriacutea un error pensar que todos los conventos femeninos estaban integrados por laquocaacutendidas palomasraquo Una monja en el siglo XVI y XVII teniacutea mucha maacutes fuerza que una mujer ordinaria ya que actuaban en grupo y la entrada a los recintos donde viviacutean estaba permitida solo a mu-jeres Esta situacioacuten las haciacutea mucho maacutes fuertes a todos los niveles que una mujer sola protegida uacutenicamente por su familia laquoLas monjas durante los siglos XVI y XVII lucharon por eludir la clausura y por zafarse del control que los frailes de las secciones masculi-nas de sus congregaciones ejerciacutean sobre ellasraquo (Vigil 230) Soacutelo un antildeo maacutes tarde que dontildea Ana Mariacutea del Costado de Cristo en 1651 y a 12 leguas de Meacutexico nacioacute la sin par Sor Juana Ineacutes de la Cruz hija de don Pedro Manuel de Asbaje natural de Vergara (Vizcaya) y de Dontildea Isabel Ramiacuterez de Santillana hija de espantildeoles (Serrano y Sanz 268 289) Por ser sin lugar a dudas la poeta maacutes importante de su tiempo y probable-mente la maacutes conocida del mundo hispano no profundizaremos en ella Su obra es un canto a la inteligencia y el exponente maacutes destacado de la literatura barroca americana tanto en prosa como en verso Destacareacute simplemente que Sor Juana Ineacutes pese a vivir en un sociedad donde no eran excesivas las libertades concedidas a las mujeres tuvo el caraacutecter y la determinacioacuten de dejarnos las maacutes bellas poesiacuteas amorosas que si bien estuvieron enmarcadas en un ambiente religioso como era de esperar por su condicioacuten

163ESPANtildeOLAS DE ULTRAMAR EN LA HISTORIA Y EN LA LITERATURA

pudieron transcender como unas de las maacutes bellas manifestaciones literarias que hoy en diacutea se conservan Fue su agudeza mental sensibilidad y cultura tal que no fueron suficientes los soacutelidos muros del convento para contener el genio de tan extraordinaria mujer Recordemos sus conocidiacutesimos versos en defensa de las mujeres

Hombres necios que acusaacuteisa la mujer sin razoacutensin ver que sois la ocasioacutende lo mismo que culpaacuteis142

Las metaacuteforas y la delicadeza que emplea en rebatir a su obispo en su laquoRespuesta a sor Filotea de la Cruzraquo no son solamente el epiacutetome del feminismo de su tiempo sino una de las maacutes brillantes manifestaciones del barroco hispano Poesiacutea teatro ensayo y un conocimiento extraordinario de las ciencias claacutesicas de su tiempo hacen de esta mujer un ejemplo extraordinario de las letras universales Ya son cientos los artiacuteculos y libros que se han escrito sobre Sor Juana y no dejan de aparecer tesis doctorales sobre los maacutes diversos temas conectados con la citada autora143 Como nos dice Stephanie Merrim en su documentada obra Early Modern Womenrsquos Writing and Sor Juana Ineacutes de la Cruz

She wrote and published on secular themes as atypical for a nun as human love Her remarkably extensive writings essayed and reenacted most of the (male) poetic dramatic theological and even philosophi-cal discourses of her times in the metropolis making her works a com-pendium of baroque culture in its diversity and syncretism Sor Juana self-creation as a learned women effectively toppled many of the walls in which she was materially enclosed and positioned her within the dynamic world of early modern European culture (xii)

No se debe dejar de mencionar a otras escritoras novohispanas de la eacutepoca que aun-que no fueron tan proliacuteficas y relevantes como Juana Ineacutes de la Cruz dejaron testimo-nio de algunos acontecimientos que tienen intereacutes socioloacutegico o testimonial Este es el caso de Dontildea Mariacutea Estrada Medinilla de igual nombre y apellido que la mujer que acompantildeoacute a las tropas de Corteacutes en su primera entrada a Meacutexico Natural de Meacutexico publicoacute toda su obra a mediados del siglo XVII concentraacutendose principalmente en la lle-gada del Marqueacutes de Villena virrey y capitaacuten general de la Nueva Espantildea a la ciudad de Meacutexico en el antildeo 1640 Escrita en octavas reales la obra trata de las fiestas de toros y cantildeas con que se obsequioacute al citado virrey Fue impresa en Meacutexico en 1641 (Serrano y Sanz 269 402)

Mucho maacutes importante para el presente libro es Dontildea Isabel de Guevara que escribioacute en 1556 la carta en que se expone la ayuda que ofrecieron las mujeres en el descubri-miento y conquista del Riacuteo de la Plata No cabe la menor duda de que esta carta es uno

142 Para una mejor comprensioacuten del caraacutecter de esta excepcional mujer veacutease entre los numeros trabajos publicados Fredo Arias de la Canal Intento de psicoanaacutelisis de Juana Ineacutes y otros ensayos sorjuanistas (Meacutexico Frente de Afirmacioacuten Hispanista 1972) 47

143 Veacuteanse entre otros trabajos Octavio Paz Sor Juana Ineacutes de la Cruz o las trampas de la fe Georgina Sabat de Rivers En busca de Sor Juana Margo Glantz Sor Juana la comparacioacuten y la hipeacuterbole Gerard C Flynn Sor Juana Ineacutes de la Cruz Stephanie Merrim Feminist perspectives on Sor Juana Ineacutes de la Cruz Pamela Kirk Sor Juana Ineacutes de la Cruz religion art and feminism

164 JUAN FRANCISCO MAURA

de los documentos maacutes importantes con que contamos en relacioacuten a la aportacioacuten fe-menina en el proceso de la conquista de Ameacuterica Su importancia viene dada por varios factores Primero es uno de los primeros testimonios mdashsi no el primeromdash en donde se expone abiertamente la indispensable colaboracioacuten de las mujeres en el descubrimien-to y conquista de tierras en el Nuevo Mundo laquoQue si no fuera por ellas todos fueran acabadosraquo En segundo lugar la informacioacuten vertida en estas liacuteneas presenta en parte la manera de pensar de una mujer espantildeola en tales circunstancias Extraordinario tes-timonio de primera mano que nos da una idea de lo que significoacute en muchos casos el valor y entrega constantes de muchas de estas mujeres que auacuten a riesgo de perder sus vidas no dudaron en luchar al lado de los hombres por una causa que consideraban laquocomuacutenraquo

La relevancia histoacuterica de dicha carta hace que merezca ser transcrita en su totali-dad

Carta de dontildea Isabel de Guevara a la princesa gobernadora dontildea Juana exponiendo los trabajos hechos en el descubrimiento y conquista del Riacuteo de la Plata por las mujeres para ayudar a los hombres y pidiendo repartimiento

para su marido Asuncioacuten 2 de julio de 1556

Muy alta y muy poderosa sentildeora

A esta provincia del Riacuteo de la Plata con el primer gobernador de ella don Pedro de Mendoza hemos venido ciertas mujeres entre las cuales ha querido mi ventura que fuese yo la una y como la armada llegase al puerto de Buenos Aires con mil quinientos hombres y les faltase el bastimento fue tamantildea el hambre que a cabo de tres meses murie-ran los mil esta hambre fue tamantildea que ni la de Jerusalem se le puede igualar ni con otra ninguna se puede comparar Vinieron los hombres en tanta flaqueza que todos los trabajos cargaban de las pobres mu-jeres asiacute en lavarles las ropas como en curarles hacerles de comer lo poco que teniacutean limpiarlos hacer centinela rondar los fuegos armar las ballestas cuando algunas veces los indios les veniacutean a dar guerra hasta cometer a poner fuego en los versos y a levantar los soldados los que estaban para ello dar arma por el campo a voces sargentean-do y poniendo en orden los soldados porque en este tiempo como las mujeres nos sustentamos con poca comida no habiacuteamos caiacutedo en tanta flaqueza como los hombres Bien creeraacute V A que fue tanta la so-licitud que tuvieron que si no fuera por ellas todos fueran acabados y si no fuera por la honra de los hombres muchas maacutes cosas escribiera con verdad y los diera a ellos por testigos Esta relacioacuten bien creo que la escribiraacuten a V A maacutes largamente y por eso cesareacute Pasada esta tan peligrosa turbunada determinaron subir el riacuteo arriba asiacute flacos como estaban y en entrada de invierno en dos bergantines los pocos que quedaron vivos y las fatigadas mujeres los curaban y los miraban y les guisaban la comida trayendo la lentildea a cuestas fuera del naviacuteo y animaacutendolos con palabras varoniles que no se dejasen morir que presto dariacutean en tierra de comida metieacutendolos a cuestas en los

165ESPANtildeOLAS DE ULTRAMAR EN LA HISTORIA Y EN LA LITERATURA

bergantines con tanto amor como si fueran sus propios hijos Y como llegamos a una generacioacuten de indios que se llaman tinbues sentildeores de mucho pescado de nuevo los serviacuteamos en buscarles diversos modos de guisados porque no les diese en rostro el pescado a causa de que lo comiacutean sin pan y estaban muy flacos Despueacutes determinaron subir el Paranaacute arriba en demanda de bastimento en el cual viaje pasaron tanto trabajo las desdichadas mujeres milagrosamente quiso Dios que viviesen por ver que en ellas estaba la vida de ellos porque todos los servicios del naviacuteo los tomaban ellas tan a pechos que se teniacutea por afrentada la que menos haciacutea que otra sirviendo de marear la vela y gobernar el naviacuteo y sondar de proa y tomar el remo al soldado que no podiacutea bogar y escotar144 el naviacuteo y poniendo por delante a los soldados que no se desanimasen que para los hombres eran los trabajos verdad es que a estas cosas ellas no eran apremiadas ni las haciacutean de obliga-cioacuten ni las obligaba si solamente la caridad Asiacute llegaron a esta ciudad de la Asuncioacuten que aunque ahora estaacute muy feacutertil de bastimentos en-tonces estaba de ellos muy necesitada que fue necesario que las muje-res volviesen de nuevo a sus trabajos haciendo rosas con sus propias manos rosando y carpiendo y sembrando y recogiendo el bastimento sin ayuda de nadie hasta tanto que los soldados guarecieron de sus fla-quezas y comenzaron a sentildeorear la tierra y adquirir indios e indias de su servicio hasta ponerse en el estado en que ahora estaacute la tierra He querido escribir y traer a la memoria de V A para hacerle saber la ingratitud que conmigo se ha usado en esta tierra porque al presente se repartioacute por la mayor parte de los que hay en ella asiacute de los anti-guos como de los modernos sin que de miacute y de mis trabajos se tuviese ninguna memoria y me dejaron de fuera sin me dar indio ni ninguacuten geacutenero de servicio Mucho me quisiera hallar libre para me ir a presen-tar delante de VA con los servicios que a SM he hecho y los agravios que ahora se me hacen mas no estaacute en mi mano porque estoy casada con un caballero de Sevilla que se llama Pedro de Esquivel que por servir a SM ha sido causa que mis trabajos quedasen tan olvidados y se me renovasen de nuevo porque tres veces le saqueacute el cuchillo de la garganta como allaacute VA sabraacute A que suplico mande me sea dado mi repartimiento perpetuo y en gratificacioacuten de mis servicios [en el origi-nal del AHN Diversos doc 141 dice ademaacutes mande que sea proveydo mi marido de alguacuten cargo conforme a la calidad de su persona pues el de su parte por sus servicios lo merece] lo merece Nuestro sentildeor acre-ciente su Real vida y estado por muy largos antildeos De esta ciudad de la Asuncioacuten y de julio 2 1556 antildeosServidora de V A que sus Reales manos besa

Dontildea Isabel Guevara

144 Sacar agua de un riacuteo acequia o presa

166 JUAN FRANCISCO MAURA

Sobremdash A la muy alta y muy poderosa sentildeora Princesa dontildea Joana Gobernadora de los reinos de Espantildea etc ndash En su Consejo de Indias (Isabel de Guevara 619-21)

Iroacutenicamente la carta teniacutea que llegar a manos de la desdichada heredera del trono de Castilla e hija de los Reyes Catoacutelicos Juana laquola Locaraquo que habiacutea muerto el antildeo an-terior Son profeacuteticas las palabras de esta mujer no soacutelo porque sus hechos personales quedasen en el olvido sino porque incluso se ha borrado la historia de las mujeres en el Nuevo Mundo negando su presencia Por lo menos Isabel Guevara tuvo acceso a una pluma iquestCuaacutentas seriacutean las que ni siquiera sabriacutean escribir

Otra contemporaacutenea fue dontildea Leonor de Iciz que vivioacute durante la segunda mitad del siglo XVI Interesa sobre todo por los sonetos que escribioacute en elogio de Ercilla soldado que participoacute en la conquista de Chile y que se inmortalizoacute con su obra La Araucana (Serrano y Sanz 269 534) Lo mismo hizo Dontildea Bernarda Lintildeaacuten en 1610 autora de otro soneto en memoria del capitaacuten Gaspar Peacuterez de Villagraacute que participoacute en la conquista de Nuevo Meacutexico (Serrano y Sanz 270 14) Los escritos de estas mujeres tratan de de dos de las eacutepicas maacutes dramaacuteticas de la conquista

En el Peruacute y en pleno siglo XVII aparece otra fundadora de conventos Sor Bernardina de Jesuacutes que ademaacutes fue comparada con Santa Teresa por la semejanza de sus laquocartasraquo con las de la santa de Avila Fue fundadora del convento de Tacunga en Quito maacutes tarde destruiacutedo por un terremoto Dice Serrano y Sanz con respecto a su biografiacutea un tanto legendaria que fue carmelita descalza de Lima y hermana de Dontildea Mariacutea Benavides y Esquivel abuela de D Pedro de Peralta Barnuevo (Serrano y Sanz 269 553) Dicen que esta santa se alimentoacute durante treinta antildeos con laquochochos y caacutescaras de naranja hecho tan raro como increiacuteble Cuando fallecioacute reparaban las monjas en ponerle una vara de azucenas porque habiacutea sido casada y aquellas flores aparecieron milagrosamente sobre el cadaacuteverraquo (Serrano y Sanz 269 553)

Otra limentildea del primer cuarto del siglo XVII con reputacioacuten de santa fue Dontildea Luisa Melgarejo En este caso no se trata de una religiosa de oficio sino de la mujer del doctor Juan de Soto La uacutenica diferencia es que dontildea Luisa al parecer teniacutea laquovisiones y reve-lacionesraquo lo que debioacute poner nervioso a maacutes de un miembro del tribunal del laquoSanto Oficioraquo que consideraron sus escritos laquoculpadosraquo De su papel de laquosantaraquo pasa por lo tanto al de laquoposesaraquo o laquoendemoniadaraquo El inquisidor de Lima Gaitaacuten escribioacute un infor-me donde a traveacutes de la opinioacuten puacuteblica y de otras averiguaciones se deciacutea que dontildea Luisa Melgarejo laquomujer santaraquo sabiacutea cuando las almas de los difuntos saliacutean del Purga-torio El diacutea 14 de noviembre de 1623 se decidioacute tomar posesioacuten de todos los cuadernos en los que habiacutea escrito las experiencias de todos sus laquoarrobos suspensiones extasis y revelacionesraquo Estos cuadernos una vez recogidos presentaron toda una serie de al-teraciones borrones adiciones enmiendas incluso diferente letra por lo que despueacutes de haber sido examinados resultaron culpables145 Excelente imaginacioacuten debioacute tener dontildea Luisa Melgarejo la suficiente al parecer para convencer a algunos miembros de la iglesia de que en sus escritos laquohabiacutea algoraquo que mereciacutea la pena Estas cosas ocurriacutean en Lima uno de los centros culturales maacutes importantes de la vida social y poliacutetica en la Ameacuterica espantildeola Lima a comienzos del siglo XVII seguacuten el empadronamiento llevado

145 Serrano y Sanz 270 47 Veacutease J T Medina Historia del tribunal del Santo Oficio de la Inquisicioacuten de Lima (1569-1820) (Santiago Imprenta Gutemberg 1887) Tomo II 34-41

167ESPANtildeOLAS DE ULTRAMAR EN LA HISTORIA Y EN LA LITERATURA

a cabo en 1614 por el marqueacutes de Montesclaros era una ciudad de 25000 habitantes de los que 11000 eran espantildeoles El nuacutemero de religiosos y religiosas llegaba a 1720 (Pittaluga 77)

Se sabe que en la Isla de Santo Domingo durante el siglo XVI nacioacute o al menos resi-dioacute una poeta de ceacutelebre apellido en los aconteceres del Nuevo Mundo Dontildea Elvira de Mendoza de la que se conserva un manuscrito en la Real Academia de la Historia laquoCantares miacuteos que estaacuteis rebeladosraquo Eugenio de Salazar hace un elogio de ella como poeta en un Soneto a la ilustre Poeta y Sentildeora Dontildea Elvira de Mendoza moradora en la ciudad de Santo Domingo (Serrano y Sanz 270 53)

Nacida en Burgos sobre el antildeo 1590 dontildea Luisa de Padilla merece un lugar aparte dentro del grupo de mujeres escritoras de su eacutepoca Por su estilo faacutecil y castizo su no-vedad de pensamientos y su rica erudicioacuten recibioacute el siguiente comentario de Manuel Serrano y Sanz laquoPocas figuras hay en nuestra historia literaria femenil que puedan compararse a esta eminente prosista acaso la maacutes notable de cuantas florecieron en Es-pantildea durante el siglo XVIIraquo (Serrano y Sanz 270 95-96) Este comentario y comparacioacuten deberiacutea ampliarse para que tambieacuten incluyese a laquola historia literaria varonilraquo

Dontildea Luisa fue defensora de la labor que la Inquisicioacuten estaba realizando en la laquolim-piezaraquo de mujeres laquosoldados del demonioraquo que existieron en algunas provincias espa-ntildeolas en aquel tiempo Muchas de las mujeres que combinaban la magia con los po-deres curativos fueron condenadas no solamente por hombres de la Inquisicioacuten sino tambieacuten por mujeres de todas las clases sociales como es el caso de Luisa de Padilla condesa de Aranda En su obra Elogios de la verdad e invectiva contra la mentira preveniacutea contra aquellos que practicaban artes en contra de la religioacuten cristiana La magiacutea negra seguacuten Padilla era la causante de que muriesen casi tantas personas como otras causas naturales habieacutendose descubierto hasta seis mil brujas en Vizcaya y Guipuzcua con-fesando una mujer de un pueblo pequentildeo haber matado con su laquomagiaraquo a ochocientas personas (Perry 31) Eran estos laquomales de ojoraquo y maldiciones seguacuten la autora las causas de que se secasen los pechos de las madres lactantes que se separasen las parejas casa-das y que abortasen las embarazadas (Perry 31)

Si se tiene en cuenta que dontildea Luisa estuvo emparentada con la maacutes rancia aristocra-cia de su tiempo o lo que es lo mismo con algunos de aquellos que en cierta manera dirigiacutean los destinos de Espantildea en aquella eacutepoca (Duques de Lerma Duque de Uceda Marqueacutes de Cueacutellar Conde de Santa Gadea Marqueacutes de Belmonte por citar algunos) se comprenderaacute mejor su identificacioacuten con una institucioacuten que en teoriacutea velaba por la salvaguarda de los valores laquoeternosraquo de una Espantildea destinada a ser la campeona del ca-tolicismo durante los siglos XVI y XVII El padre de dontildea Luisa fue don Martiacuten de Padilla y Manrique extraordinario militar que proboacute su valor contra enemigos moriscos ingle-ses holandeses piratas berberiscos y el renegado genoveacutes Muley Faxad Fue veterano de la batalla de Lepanto donde apresoacute a cuatro galeras y acompantildeoacute con su escuadra a la reina Dontildea Margarita de Austria cuando vino de Geacutenova en 1598 laquoHabiacutea obtenido a 24 de julio de 1587 el tiacutetulo de Conde de Santa Gadea y en 1596 el de Capitaacuten General de la Armada del mar Oceacuteanoraquo (Serrano y Sanz 27095-96)

Por otra parte tambieacuten se sabe que dontildea Luisa participoacute directamente y desde tem-prana edad en la praacutectica de algunas actividades intelectuales como la historia y la arqueologiacutea a la vez que dedicaba su tiempo a virtudes cristianas como la caridad y el socorro de los necesitados (Serrano y Sanz 270 97) Resulta mucho maacutes faacutecil compren-

168 JUAN FRANCISCO MAURA

der la postura ideoloacutegica de esta gran mujer si tienen en cuenta ademaacutes de los factores antes mencionados otros tantos de caraacutecter biograacutefico concernientes a su educacioacuten y matrimonio

Otra escritora fue la mexicana dontildea Mariacutea Casilda Pozo natural de Temestla (Meacutexi-co) Nacida en el mes de abril de 1682 dejoacute escrita su biografiacutea en 16 cuadernos el ma-nuscrito original se encuentra en la biblioteca del colegio de San Gregorio de Meacutexico Fue su confesor el jesuiacuteta Domingo Quiroga que fue quieacuten la incitoacute a escribir su obra (Serrano y Sanz 270 137) Sor Juana de San Antonio aparece a principios del siglo XVII formando parte de un grupo de religiosas espantildeolas que fueron a Manila por la ruta de Meacutexico Ademaacutes de distinguirse por sus cualidades personales su obra interesa por ofrecer informacioacuten testimonial y costumbrista acerca de la forma de vestir de chinos y japoneses (Serrano y Sanz 270 225)

Otra monja esta vez ecuatoriana fue Gertrudis de San Ildefonso Nacida en 1652 profesoacute su vocacioacuten en el convento de Santa Cruz de Quito dejando escrita su vida por mandato de su confesor el padre Martiacuten de la Cruz el cual hizo una biografiacutea laquoen tres gruesos voluacutemenesraquo Gertrudis de San Ildefonso murioacute en 1709 (Serrano y Sanz 270 300) en olor de santidad

Sor Mariacutea Ana Agueda de San Ignacio nacioacute el 3 de marzo de 1695 en la dioacutecesis de la puebla de los Angeles en un rancho del lugar de Santiago Tecaliacute (Serrano y Sanz 270300) Esta monja mexicana escribioacute varias obras durante su vida conventual a lo largo de la cual desempentildeoacute el cargo de priora por muchos antildeos Entre sus obras todas de caraacutecter piacuteo y de laquoamor divinoraquo escribioacute un curioso y laquocopiosoraquo tratado de la Leche virginal de la Soberana Madre de Dios El padre Fr Juan de Villa Saacutenchez hace el siguiente comentario al respecto laquoen que hablando primero en sentido natural de los beneficios que debemos a Nuestra Sentildeora pasa a tratar en sentido miacutestico y alegoacuterico enten-diendo en la leche la doctrinaraquo (Serrano y Sanz 270301) Mexicana fue tambieacuten Sor Petronila de San Joseacute que ejercioacute como abadesa del Real monasterio de Jesuacutes Mariacutea de la ciudad de Meacutexico Escribioacute Vidas de varias religiosas ejemplares obra que tiene su im-portancia ya que al parecer laquoDe esta obra se sirvioacute D Carlos de Siguumlenza y Goacutengora para escribir su Parayso Occidental (Meacutexico 1684) seguacuten eacutel mismo declara en el proacutelogo diciendo lsquoa quien si hay algo bueno en esta historia se le debe todorsquoraquo (Serrano y Sanz 270 354) Menos conocida fue su compatriota Sor Luisa de Santa Catalina natural de Xacona laquopueblo situado en las inmediaciones de Zamora (Meacutexico)raquo siendo bautizada en 1682 Escribioacute Cartas espirituales a su confesor el P Juan Loacutepez de Aguado (Serrano y Sanz 270 361-62)146

Todos estos escritos la mayoriacutea de ellos ignorados por el gran puacuteblico tienen la im-portancia de darnos una perspectiva diferente En otras palabras ensentildearnos la maacutes refinada sensibilidad de muchas mujeres que permanecieron y en su mayoriacutea siguen permaneciendo a laquooscurasraquo de una eacutepoca tan rica de la literatura espantildeola como fue el Siglo de Oro Este siglo fue tambieacuten en su dimensioacuten literaria y artiacutestica patrimonio de la mujer

146 Para profundizar en muchas de estas escritoras hispano-americanas la consulta de la Biblioteca Hispano-Americana de Beristain de Souza resulta de capital importancia

169ESPANtildeOLAS DE ULTRAMAR EN LA HISTORIA Y EN LA LITERATURA

Sor Nada ardores divinos de una monja adolescente escritos ineacutedi-tos de una recieacuten profesa del siglo XVI147

iexclQueacute encantadores son tus amores hermana miacutea espo-sa iexclQueacute deliciosos son tus amores maacutes que el vino Y el aroma de tus perfumes es mejor que el de los baacutelsamos Miel virgen destilan tus labios esposa miel y leche hay en tu lengua y el perfume de tus vestidos es como aroma de incienso (Cantar de los Cantares 4 10-11)

Sor Nada llamada asiacute por humildad seguacuten dice el Indice de manuscritos de la Biblio-teca Nacional de Madrid es uno de los ejemplos maacutes desconocidos e interesantes que tenemos de la poesiacutea y prosa amoroso-religiosa del siglo XVII Hasta la fecha nunca se habiacutea publicado su obra e incluso hasta el antildeo 1995 para mi sorpresa no habiacutea copias microfilmadas de sus manuscritos en la Biblioteca Nacional Serrano y Sanz en su libro Apuntes para una Biblioteca de Escritoras Espantildeolas hace una escueta y pasajera mencioacuten de esta mujer y de su obra (68-69) siendo eso todo lo que hasta ahora se sabiacutea de ella Sus escritos consisten en los siguientes manuscritos

1 laquoEn queacute consiste un verdadero amor de Diosraquo 9 hojas uacutetiles en 4ordm letra del siglo XVII Biblioteca Nacional de Espantildea Manuscrito 1295926

2 laquoPintura del Propio Amorraquo laquoPintura del propio Amorraquo 10 hojas uacutetiles en 4ordm letra del siglo XVII Biblioteca Nacional de Espantildea Manuscrito 1295927

3 laquoEsplicacioacuten sobre en queacute consiste la paz del Almaraquo laquoQuartillas aacute un Alma que padece soledad interiorraquo 7 hojas uacutetiles en 4ordm letra del siglo XVII Biblioteca Nacio-nal de Espantildea Manuscrito 1295828

En cuanto a su persona soacutelo se nos dice que laquose encubrioacute con este seudoacutenimo laquoSor Nadaraquo Esta monja desconocida de origen hispanoamericano posee toda la frescura e ingenuidad de una joven apasionada metida por vocacioacuten u obligacioacuten a ejercer la profesioacuten maacutes comuacuten para mujeres de cierta clase social de su tiempo En sus liacuteneas podemos encontrar un misticismo simple incluso en algunos momentos infantil pero a su vez lleno de una fuerza y sensualidad interior poco comuacuten en escritos de este geacute-nero que desborda los liacutemites del laquoamor divinoraquo a traveacutes de los diaacutelogos entre el Alma y el Esposo Sor Nada consigue proyectar su amor a Dios maacutes allaacute de una experiencia romaacutentica Su experiencia es sincera y genuinamente miacutestica trascendiendo la imita-cioacuten o la propia creacioacuten poeacutetica ficcionalizada (Hatzfeld 30) Algunos pasajes son de un

147 Veacutease mi artiacuteculo Sor Nada ardores divinos de una monja adolescente escritos ineacuteditos de una monja profesa del siglo XVIIraquo Espeacuteculo Revista de estudios literarios 26 (2004) 1-10 Universidad Complutense de Madrid http wwwucmesinfoespeculonumero26sornadahtml

170 JUAN FRANCISCO MAURA

alto contenido eroacutetico con sustantivos y metaacuteforas que recuerdan la maacutes iacutentima unioacuten amorosa en unos casos y el tierno amor maternal en otros

[T]e miro Jesus mio desnudo a las inclemencias del tiempo y ardien-do en puro fuego de Amor por la salud de las Almas y me ensentildeas a que te ame con todo mi corason y puresa de espiritu No atendiendo ni buscando umanos intereses ni a solisitar consuelos ni regalos espi-rituales que suelen empantildear la puresa del noble corason No mi Jesus amable pues antes me ensentildeaste tu puro Amor que desnudo sean [sic] de encaminar mis passos desde el pesebre asta la cuna en donde te miro tan desnudo como el pesebre y todo Sentildeor por mi Amor (Mss 12959 26 hoja 1 v)

El manuscrito (12959 27) de la mencionada serie de tres contiene algunas correccio-nes quizaacute hechas por el confesor o quizaacute por ella misma cuando se dirige con excesiva familiaridad y arrebatado fervor a su Amado148 He escogido el manuscrito (12959 Caja 28) en primer lugar por ser el ejemplo maacutes representativo de su poesiacutea y prosa En este manuscrito encontramos de forma maacutes directa que alegoacuterica toda la frescura de un diaacutelogo entre Jesuacutes y el alma que raya como diriacutea Cervantes laquoa la llana y sin rodeosraquo (667 lib 2 cap 38) con el doloroso y a veces desesperado deseo de la entrega y la unioacuten final con el Amado La ortografiacutea no ha sido corregida respetaacutendose el texto ori-ginal149 Veamos el siguiente fragmento

Mira que te amo con Amor de padre y con Amor de esposo el mas fino y puro enamorado que no tan solo me presio de darte mi mano sino tambien todo mi cuerpo y sangre para que con mi pan de vida te sustentes y te regales a tus anchuras y que con mi propio espiritu vivas en paz como tu lo deseas y que mis amores sean unico alivio en tus trabajos en esta mortal vida pues si esto es asi y sabes que muero por darte vida dime esposa mia de que te fatigas Dame querida tus bras-sos y dime si me amas como yo te amo (Hoja 4)

148 La antologiacutea de Promis ha procurado insertar entre los textos antoloacutegicos algunos que se refieren a la es-critura de mujeres fundamentalmente de aquellos generados en el interior de los espacios conventuales Estos textos se fundan como laquohistorias de vidasraquo y responden casi siempre a los requerimientos de los confesores de las monjas coloniales En este sentido resulta valiosiacutesima la incorporacioacuten de la llamada Relacioacuten autobiograacute-fica de Sor Ursula Suaacuterez como una muestra significativa de la escritura monjil entendida en esta eacutepoca (como tambieacuten en la tradicioacuten europea medieval) inserta en las denominadas laquolabores de manoraquo de las religiosas ya que el texto escrito por mandato se convertiacutea en una suerte de entramado o tejido linguumliacutestico es decir en un nuevo bordado que la mayor parte de las veces el confesor convertido en censor iba haciendo tachando y enmendando En la antologiacutea Promis agrega un texto de Sor Tadea Garciacutea de la Huerta titulado Relacioacuten de la inundacioacuten que hizo el riacuteo Mapocho de la ciudad de Santiago de Chile en el monasterio de Carmelitas titular de San Rafael el diacutea 16 de junio de 1783 se trata de un poema tipo romance escrito en versos octosilaacutebicos y que da cuenta de lo sucedido ese diacutea en el convento (Resentildea de la literatura del reino de Chile de Joseacute Promis Eddie Morales Pintildea httpwwwupaclpublicaciones2002literatura_promishtm)

149 Son frecuentes las faltas ortograacuteficas Una de ellas es el uso constante del seseo La ausencia de acentua-cioacuten y puntuacioacuten exceptuando alguacuten punto o coma arbitrario no seguido casi nunca de mayuacutescula inicial lo mismo que el uso igualmente aribitrario de la h o de b v r q g j m n x etc No olvidemos de la misma forma la laxitud linguumliacutestica existente en el siglo XVII (no sabemos a queacute parte de eacuteste pertenece el manuscrito) asiacute como la joven edad de la monja

171ESPANtildeOLAS DE ULTRAMAR EN LA HISTORIA Y EN LA LITERATURA

Los versos del presente manuscrito poseen la misma fuerza que tiene su prosa Con una estructura estroacutefica indefinida estaacuten aparentemente corregidos por alguien que tu-vo la oportunidad de conocer personalmente a la autora Muy probablemente se trate del padre al que hace referencia al principio del primer manuscrito laquoMandame el Pd que le declare en que consiste un verdadero amor a Diosraquo a continuacioacuten continuacutea con su caracteriacutestica humildad laquo[O]bedesere y dire lo q Dios me inspire segun mi rudesa y simplisidadraquo (Mss 12959 26) En cuanto a la fuerza pasional de esta joven observamos con cierta tristeza coacutemo aparece sublimada en sus escritos con toda la enegiacutea de una joven mujer llena de intensidad y vida pero encerrada en los liacutemites de un convento Veamos un ejemplo en donde responde el Alma en los siguientes versos

O mi enamorado Jesus O mi dulse y tierno amanteO alegria de los sielos O dulse Jesus amable

(Toda Sentildeor me derrito toda Sentildeor me desagoy quiero vivir por ti ea sentildeor abrasadme) [Tachado en el original]

Toda Sentildeor me derrito toda Sentildeor me desagoy quiero morir por vos ea Sentildeor que ya acabo

Ya tus amores me llaman ya tus perfumes me traencon suspiros y agonias Sentildeor hasta que te alcanse

O mi Jesus amoroso no puedo mas dilatarmeya la pasiensia me falta dulse Jesus abrasadme

(No puedo vivir sin vos no puedo mas dilatarmeya la pasiensia me falta dulse) [Tachado en el original]

No puedo vivir sin vos mi dulse Jesus amablepues me teneis echisada siendo mi esposo y mi Padre

Ay que me abraso Ay que me quemo del Amor deJesus nasareno como no tocan y tantildeen a fuego150

Estos versos llenos de arrebato sublimado conectan con toda la tradicioacuten miacutestica es-pantildeola que se remonta a Ramoacuten Llul y que culmina en el maacutes universal de nuestros

150 En toda la fuerza y simbologiacutea del amor maacutes iacutentimo del maacutes alto y sublime placer de la unioacuten de los amantes tal como lo encontramos en el Cantar de los Cantares y en San Juan de la Cruz Leemos en la Biblia

Ya me he quitado la tuacutenica iquestCoacutemo volver a vestirme Ya me he lavado los pies iquestCoacutemo volver a ensuciarlosMi amado metioacute su mano por el agujero (de la llave) y mis entrantildeas se estremecieron por eacutel Me levanteacute para abrir a mi amado Mis manos destilaron mirra y mis dedos mirra exquisita en el pestillo de la cerradura (5 3-5)

Nos ocurre lo mismo con San Juan de la Cruz en su insuperable poema laquoLlama de amor vivaraquo

iexclOh cauterio suaveiexclOh regalada llagaiexclOh mano blanda iexclOh toque delicadoque a vida eterna sabey toda deuda pagaMatando muerte en vida la has trocado

172 JUAN FRANCISCO MAURA

miacutesticos San Juan de la Cruz Esta tradicioacuten se extiende hasta finales del siglo XVII esto es hasta los finales del Barroco siendo un poco maacutes tardiacuteo en la Ameacuterica espantildeola Sin tener como propoacutesito discutir en el presente trabajo a queacute corriente miacutestica pertenece la obra de Sor Nada es necesario resaltar no obstante el hecho de que estaacute escrito por una mujer y ademaacutes de tierna edad El manuscrito 12959 Caja 26 termina con estas pa-labras laquo[T]odas estas boverias escrivi por entretenimiento siendo resien profesa en la religion Sor Nadaraquo Mas no por la juventud de su autora los escritos dejan de tener lo-gradas metaacuteforas imaacutegenes y siacutembolos sacados de la naturaleza La alegoriacutea de la unioacuten matrimonial poseeacute el fuego liacuterico de la maacutes apasionada de las relaciones amorosas vivi-ficada por perfumes flores insectos animales escarchas nieves o abrojos Por lo tanto aunque la narracioacuten destile cierta ingenuidad no carece por ello de un vocabulario rico con el sabor popular de la poesiacutea de los cancioneros y romances de tradicioacuten renacen-tista No ha sido otra mi intencioacuten que la de rescatar del olvido unos escritos en prosa y en verso llenos de frescura y espontaneidad que nos muestran la pasioacuten con que la joven novicia se laquoentrega en cuerpo y almaraquo a los menesteres de su profesioacuten guiada por un padre espiritual en esos primeros antildeos de formacioacuten Esta ha sido la razoacuten por la que presento a continuacioacuten el citado manuscrito en su totalidad

Sor Nada (Mss 1295928)

laquoEsplicacion sobre en que consiste la paz del AlmaraquolaquoQuartillas a un Alma que padece soledad interiorraquo

[7 hojas utiles en 4ordm letra del siglo XVII]

+

Esplicacion sobre en que consiste la paz del Alma

Pareseme segun mi rudo entender que la verdadera paz del Alma con-siste en una muy pura y buena consiencia en un corason liso y bien intensionado en una verdadera rectitud de espiritu en el qual el Alma procura bolar a Dios sin jamas detenerse a respetos umanos ni reparar en que me diran ni de que me censuraran sino me apresuro a seguir a unos entenderes y pareseres dorados en los quales pretende el mundo engantildear y ensuciar si se puede la puresa de un corason unicamente de Dios y de su Santa ley y se lo conserva cristalino con la divina asis-tencia de la gracia y comprendido de su Amor y temor siguiendo la luz divina de tan amante Sentildeor Dios y ombre verdadero con que este ilustrado corason ni se altera ni se mueve por los disfrasses dorados que ase el mundo y sus moradores mayormente con falssas amistades aunque con ellos muestre buena intension Con la misma grasia y luz de Dios conose el buen corason estos disfrasses que le ase el mundo y se retira de todo con espiritu y valor esto sin la menor alterasion sino que en suma paz se retira a buscar a Dios dentro de su mismo corason

173ESPANtildeOLAS DE ULTRAMAR EN LA HISTORIA Y EN LA LITERATURA

y se abrasa con su pura verdad en la qual se le descubren mil interio-res secretos tan solidos puros y verdaderos que la misma Alma queda abismada y de puro grandes no los puede bien comprender ni esplicar pero estos mismos secretos divinos le sirven de espuelas para no solo correr sino bolar con pies de plumas en seguimiento de su bien ama-do Jesus y como este soberano Sentildeor es tan amante de sus espossas las Almas luego que la ve bolar con pies de plumas la sale al encuen-tro en despoblado campo que se deve de llamar Campo de Amor de Dios y el mismo Sentildeor se viene a las manos por ser Dios que nos ama con Amor infinito de Padre benigno y amoroso con que asiendose en contra deso este divino enamorado en lo interyor de el Alma que le busca con ansias de servirle y amarle y en aquella soledad traban una conversasion amorosa y sensilla como la pluma simple de quien esto escrive

Divino enquentroDios y el Alma en la soledad

O Soberano Principe de la paz dise el Alma tus perfumes me traen a ti bolando porque alla en el mundo y sus valedores me pretendian engantildear y entretenerme con pegaminossas amistades que facilmen-te me pudieran envenenar y matarme apartandome de ti Mi dulse Jesus amable mi Redentor Soberano que con tantas ansias me sales al enquentro como siervo [ciervo] erido de mis Amores los quales tu Amor me ofrese para que con tu mismo Amor te ame y te sirva en paz sin perturbarme ni contristarme ni cansarme de padeser pasando si se ofrese por escarchas nieves espinas ni abrojos ni por otros diverssos trabajos ni piedras de contradision que tu me puedes permitir pues por mas que el mar se levante con sus ferosses olas contra mi ni piedras se me tiren al rostro en todo Sentildeor me quieres con serenidad pasifica sin la menor perturbasion Todo Sentildeor quieres que lo tome con Serenidad de espiritu y asi vengo a ti bolando para que mejor me ensentildees a vivir segun las leyes de tu noble condision que me son muy agradables por mas que el mundo me las despresie por segir sus vanidades y torsidas intensiones con apariensias de bien y con este engantildeo y bien me quie-ro mas a mi que no a mi proximo veo que segun mi pareser se pierden muchas Almas y tambien de aquellos que se depresian y pasan por muy espirituales Con que me paresen pocos los que llegan a padeser con desnudes151 de espiritu por tu purisimo Amor y me parese essas se quedan muy atrasadas en la virtud por el peligro de bolver muy atras el paso de modo que se pueden despentildear y pereser en su misma desgra-sia ya por soberbia o por otras enfermedades que se les pega al corason y asi lo pasan como siegos ignorantes sin advertir en sus peligros

151 La letra en cursiva es miacutea

174 JUAN FRANCISCO MAURA

este aquerdo Sentildeor y otros que tu verdad me ensentildea me ase venir uyendo de las paredes del mundo y me vengo a ti Dios mio bolando con las dos Alas del Amor y temor que tu mismo Amor me ofrese tan de gracia y tan de grado que no se duentildeo mio con que lo responder a tan soberano beneficio y finesa de tus entrantildeas de Amorvengo Sentildeor y esposo mio unicamente a descansar en ti pues los peli-gros del camino me an puesto en mucho sobresalto temiendo el per-derte y sin ti perderme para siempre por una eternidad sin fin pues deseo amado mio ganarme ganandote a ti y vivir en ti aora en vida y despues eternamente y estos cuidados me traen fatigada molida y cansada y no podre tener alivio y descanso sino viendome entre tus brassos aunque sea estando en cruz pues ese es el fin de mis deseos vivir y morir en ti ablame mi cordero manso y ensentildeame a que ver-daderamente te ame como fiel esposa ea mi caro amigo dame la ma-no pues sabes Amor mio que en mi no ay mano sin tu misma mano y asi mi Dios y Sentildeor mi Principe Soberano con umilde rendimiento y deseos de alcansarte te suplico me des la mano y me consueles en estos mis trabajos Deseo Sentildeor vivir en paz y los malos amores de mi Naturaleza flaca no me dejan detentar y no quieren por mi desgrasia atropellar con las leyes de tu Amor ni quisiera perturbar mi corason quando me veo con un torvellino de olas y contratiempos que a menu-do me suelen sercar pero si tu Sentildeor me das la mano nada temo sino que me aseguro y vivire en paz sin que me fatiguen los contratiempos pues mi mano en la tuya y mi espiritu en el tuyo por mas borrascas que me envistan no seran bastantes para rendir mi voluntad a la suya bien si para pronunsiar un fiat que resuene bien atras en tus oidos y que en medio de mis fatigas me ponga a cantar tus divinas misericor-dias hea Sentildeor ya pretendo serrar mis labios por no desir mas bove-rias y deseo Sentildeor oir tus palabras de vida eterna abla Sentildeor que tu sierva oye con atension y cuydado mira mi Dios que se me ase tarde y espero con prisa deseando saborearme y aprovecharme de los ecos de tu Santa dotrina pues todas tus palabras saben a eterna vida callen pues mis sentidos y potensias y todo se ponga en paz pues mi dulse y soberano Sentildeor no se escusara de ablar me aun que en mudo silensio hea mi gran Prinsipe de la paz ablame que tus puros amores me traen perdida por estos asperos montes y mis cortos pasos no te pueden dar alcanse mirame mi Dios a tus pies postrada como un vil gusano y me-nor ormiga de la tierraabla Jesus y dise a su esposa el Alma querida esposa mia que me pides y por que te muestras tan fatigada y mal sufrida no vives como corde-rita del campo buscando de mis pechos el sustancial pasto mi Amor no te sustenta y mi grasia te promete eterna vida pues dime amada de que te fatigas y te muestras mal sufrida mira que te amo con Amor de padre y con Amor de esposo el mas fino y puro enamorado que no tan solo me presio de darte mi mano sino tambien todo mi cuerpo y

175ESPANtildeOLAS DE ULTRAMAR EN LA HISTORIA Y EN LA LITERATURA

sangre para que con mi pan de vida te sustentes y te regales a tus an-churas y que con mi propio espiritu vivas en paz como tu lo deseas y que mis amores sean unico alivio en tus trabajos en esta mortal vida pues si esto es asi y sabes que muero por darte vida dime esposa mia de que te fatigas Dame querida tus brassos y dime si me amas como yo te amoResponde el Alma152 Tu mi Dios sabes si yo te amo pues de mi solo se que mis deseos y ansias buelan a ti mas no alcanso a saber si te amo como tu de-seas ser amado y como desconfio tanto de mi y de mis prosederes falssos temo Dios mio perderme y perderte y asi Sentildeor pues no desechas mis Amores y te muestras tan fino en amarme te pido me ensentildees a vivir segun las leyes de tu pura verdad y fina condisionhija mia dise Dios la prueva de un verdadero Amor consiste en sufrir callar y padeser por mi unico Amor y en todo seguir mis pasos sin ja-mas retroseder por mas fragoso que se muestre el camino pues nunca seran tantas las espinas las escarchas ni las nieves ni los vientos bo-rrascosos que te se ofrescan pasar por mi Amor como los que mi tierno y desinteresado Amor paso por ti y siempre con mis pies descalssos y asi hija y esposa mia muestrate costante en seguir lo perfecto de mis passos pues mi braso fuerte sera en ti y peleara por ti y te sera el todo en tus nesesidades y mi Amor te convertira en dulse y suave lo amargo y molesto a la condision de la carrne

Responde el Alma

O mi enamorado Jesus O mi dulse y tierno amanteO alegria de los sielos O dulse Jesus amable

(Toda Sentildeor me derrito toda Sentildeor me desagoy quiero vivir por ti ea sentildeor abrasadme) [Tachado en el original]

Toda Sentildeor me derrito toda Sentildeor me desagoy quiero morir por vos ea Sentildeor que ya acabo

Ya tus amores me llaman ya tus perfumes me traencon suspiros y agonias Sentildeor asta que te alcanse

O mi Jesus amoroso no puedo mas dilatarmeya la pasiensia me falta dulse Jesus abrasadme

(No puedo vivir sin vos no puedo mas dilatarmeya la pasiensia me falta dulse) [Tachado en el original]

No puedo vivir sin vos mi dulse Jesus amablepues me teneis echisada siendo mi esposo y mi Padre

152 La aparicioacuten de una mayuacutescula al principio de una oracioacuten es algo totalmente arbitrario en este ma-nuscrito dada la libertad ortograacutefica de la autora Como se puede observar en la mayor parte de las veces no es el caso

176 JUAN FRANCISCO MAURA

Ay que me abraso Ay que me quemo del Amor deJesus nasareno como no tocan y tantildeen a fuego

Responde Jesus Hija mia tus simples vozes oygo y aunque resuenan bien a mis oidos pero te deseo mas mansa y pasifica en tus fervores ya sabes que no siempre as de vivir en mantillas ni a los pechos de tu Madre por que es rason que padescas con espiritu fuerte como mu-jer valerosa por que a una esposa del Rey soberano y prinsipe de la paz no le estan bien chiquerias ni fervores de nintildea malcriada y ya es ora que la destete su Madre la Naturaleza y que empesando su nueva vida camine con el favor de mi grasia sigiendo mis passos de eterna vida esto con sus pies descalssos segun mis leyes de Amor puro y desinteresado lo tienen ordenado153 y vivir en paz como lo deje en-cargado a mis apostoles Santos repitiendoles varias vezes Vivir en pas y caridad esto es un vivir en Dios y Dios en el Alma y asi hija mia el Alma que vive en paz vive en mi Como mis cortesanos en el cielo y pues me pides que te ensentildee a vivir segun las leyes de mi condision Repito el desir que te debes mostrar sufrida en todo tiempo y estado sin permitir en tu corason que ni aun los fervores se adelanten con estremos ni ademanes sino atiende y aprende de mi purisima Madre pues siempre la veras si bien lo consideras que mientras vivio en el mundo en todos sus trabajos se mostro firme fuerte costante como piedra diamante Pues mirandome nintildeo entre sus brasos desnudo en el pesebre desnudo y crusificado en los brassos de una cruz En estos y otros passos no se mudo su rostro sino que en suma serenidad y pasifico corason toda se sacrificaba enteramente en los brassos de mi Amor y rendido su corason y voluntad en la de mi eterno Padre por ejemplo te la doy y deseo que aprendas de sus nobles calidades pues te aseguro carisima que las leyes de mi condision y pura verdad todo lo allaras enserrado en el corason de mi purisima Madre sedle fiel y descansaras en paz

+

Quartillas a un alma que padese soledad interior

1Un Alma afligida y tristese ve en un campo desiertay en el su esposo la tieneAtormentada y sedienta

153 Es a traveacutes de estas liacuteneas lo que hace suponer que la autora de este diaacutelogo amoroso entre el Alma y Je-suacutes es novicia esto es laquoque estaacute empesando su nueva vidaraquo En las mismas liacuteneas una vez maacutes se hace alusioacuten al laquodesteteraquo de su vida civil laquoa una esposa del Rey soberano y principe de la paz no le estan bien chiquerias ni fervores de nintildea malcriada y ya es ora que la destete su Madre la naturalesaraquo (fol 5)

177ESPANtildeOLAS DE ULTRAMAR EN LA HISTORIA Y EN LA LITERATURA

2Pendiente se ve en el AyreSolo un hilo la sustentasin tocar el pie en el sueloporque del no tome tierra

3Mirandola esta yto a ytoaquel sol que la atraviesay la enviste con sus rayosmas ella no pestantildeea

4Como sigarra padese y como a tal se atormentabatiendo sus mismas Alasy el corason se atraviesa

5Con penas sustos temoresquando se mira assi mesmasin tener valor en nadaporque es la misma flaquesa

6Pero el Amor de su esposotoda su atension le llevay la pone en un abismopero cubierto en tiniebla

7Desea dar algun bueloy subir con ligeresapero se mira travadacon una fuerte cadena

8Clama suspira y padeseMas del todo se sujetaRindiendo su voluntadA la divina clemencia

9Los enemigos del AlmaCruelmente le asen guerray ella aunque firme y constantelos reselos la atormentan

178 JUAN FRANCISCO MAURA

10de todos modos padeseaunque gosa la asistensiadel divino esposo amadoque en su interior se recrea

11Solo de verla penary con verla tan serenadise resibe mil gustosde su sigarra pequentildea

12Le sabe el mundo a mil yelesy su trato le atormentaviendo en el mil falsedadesque todas saben a tierra

13Para poderse librardeja de correr y buelacon las Alas del Amory el mismo Amor se la lleva

Una vida dedicada a un amor divino un amor que le haraacute llenar un buen nuacutemero de cuartillas dedicadas a tan alta empresa Se desconoce si la vocacioacuten de Sor Nada con-tinuoacute con tanta intensidad el resto de sus diacuteas Ciertamente la vida en el covento no era faacutecil En algunos casos la experiencia era traumaacutetica incluso fatal para algunas de las adolescentes de la Ameacuterica Espantildeola Las reglas del claustro eran severas por varias razones Estas joacutevenes si no teniacutean el permiso de la superiora no podiacutean recibir visitas no podiacutean volver a sus casas su correspondencia era censuraba y no podiacutean salir del periacutemetro conventual Igualmente se levantaban antes del amanecer para oir misa tra-bajaban el resto del diacutea y lo maacutes interesante es que muchas veces esta vida era aceptada por muchas

Page 16: Tercera parte: Mujeres en la vida intelectual - …parnaseo.uv.es/Editorial/Maura/TerceraParte.pdf · La Biblia, por su parte, hace repetidas menciones de la mujer y sobre el comporta-

146 JUAN FRANCISCO MAURA

a esas dichas Indias y a los pobladores dellas y porque deseo que ellas se aumenten y acrecienten por las haber ganado y descubierto por la gracia de Nuestro Sentildeor con nuestra industria trabajo y costa y los po-bladores dellas no hagan sobre lo suso dicho tan excesivos gastos sino pues que van a ellas con deseo y voluntad de se ayudar y aprovechar del oro que por gracia de Nuestro Sentildeor se descubre de cada diacutea se detengan en lo gastar en semejantes cosas para se aprovechar dellos en otras cosas que maacutes les convenga asiacute para sus personas como para sus haciendas y por evitar y excusar lo suso dicho mandeacute lo platicar con algunos de mi Consejo y por ellos visto se halloacute que porque nuestros suacutebditos y naturales que viven y estaacuten en dichas Indias no gasten sus haciendas en semejantes desoacuterdenes y que las conserven y guarden pa-ra sus menesteres y por el bien y el pro comuacuten de todos generalmente mando dar esta mi carta premaacutetica sancioacuten la cual quiero y mando que haya fuerza y vigor de ley bien ansiacute y a tan cumplidamente como si fuese fecha y promulgada en Cortes por lo cual ordeno y mando que en cuanto a mi merced y voluntad fuere ninguna ni algunas personas de cualquier ley estado condicioacuten que sean que estuvieren de morada o vivienda o en otra cualquier manera en la dicha Isla Espantildeola y en las otras islas desas dichas Indias y tierra firme no puedan traer y traigan ropa alguna de brocado ni de seda ni de chamelote de seda ni zarzahaacuten ni tercenel ni tafetaacuten ni vainas ni correas de espada ni en cinchas ni en sillas ni en alcorques ni en cosa alguna ni tampoco puedan traer ni trai-gan bordados de seda ni chapado de plata ni de oro de martillo ni fila-do ni tejido ni de otra cualquier manera pero que las personas que tu-vieren en las dichas Indias bienes asiacute muebles como raiacuteces que valgan hasta la cuantiacutea de mil castellanos que ellos y los hijos que tuvieren de hasta edad de catorce antildeos traigan jubones y caperuzas y bolsas y ribe-tes y pestantildeas de seda de cualquier color que quisieren con tanto que en una ropa no traigan maacutes de un ribete y que no haya en los dichos ribetes y pestantildeas maacutes anchura de cuanto un dedo pulgar y que no se traiga en los ruedos de las ropas y que puedan traer becas de tercenel y de tafetaacuten y de papahigos de camino aforrados en el mismo tercenel y tafetaacuten y ansiacute mismo permitimos que puedan traer de seda las cora-zas y guarnecer las faldas y gocetes y capacetes y baberas y quejotes y traer cojines de seda en la silla de la jineta y que las mujeres de las tales personas que tuviesen bienes en la dicha cuantiacutea de los dichos mil castellanos y sus hijas siendo doncellas puedan traer gonetes y corseacutes y fajas de dos varas de largo de seda y [borradas dos letras por mancha de tinta] mas y de lo de vestir y mudar cuando quisieren y por bien tuvieren quier sea moyil o faldilla o cota o haacutebito u otra cualquier ropa con tanto que juntamente no puedan vestir ni vistan maacutes de una ni les pongan trepas ni tiras de seda ni de brocado ni de oro tirado ni tejido ni relido ni en las ropas de pantildeo pongan cortapisas ni lisonjas ni trepas ni tiras ni otra guarnicioacuten alguna de seda ni de brocado salvo que puedan traer un ribete o pestantildea de seda de anchura de un dedo pulgar asiacute en

147ESPANtildeOLAS DE ULTRAMAR EN LA HISTORIA Y EN LA LITERATURA

las ropas de seda como en las de pantildeo en los ruedos de las faldas y para las costuras y no otra cosa alguna y que no traigan la dicha seda en las guarniciones de las mulas ni en angarillas ni en sillas ni en pantildeos ni en otra cosa alguna y que ansiacute mismo no puedan traer mantillas de seda ni enforradas en seda sopena que l que contrario hiciere pierda las ro-pas que ansiacute trujere vestidas por primera vez y sea repartido la mitad para el juez que lo juzgare y la otra mitad para el juez que lo acusare y por la segunda que pierda la ropa y se parta como dicho es y sean desterrados de la isla donde viviere para dos antildeos y por cuanto algu-nas personas de los que nuevamente destos reinos de Castillaa van a se avecindar y poblar y estar en las dichas Indias y son de honra acae-ce que no llevan tantos bienes que valgan la dicha cuantiacutea de los mil castellanos que mando que tengan los que hubieren de traer seda en la manera que dicha es que a eacutestos tales no se entienda y extienda lo suso dicho y que puedan traer la dicha seda seguacuten y en la manera que dicha es y no maacutes hasta tanto que haya un antildeo que estaacuten en las dichas Indias que corra y se cuente desde el diacutea que llegare fasta ser cumplido y que siacute cumplido no tuviere bienes que valgan la dicha cuantiacutea de los dichos mil castellanos que no puedan traer seda ninguna so la dicha pena de suso contenida la cual mando a vos las dichas nuestras justi-cias y a cada una de vos que esta mi carta y todo lo en ella contenido y cada cosa y parte dello guardeacuteis y cumplaacuteis y ejecuteacuteis por manera que se cumpla y ejecute lo en ella contenido so pena de perdimiento de los oficios y que seades inhaacutebiles para haber otros semejantes y que pagueis la estimacioacuten de la tal ropa que dejardes de ejecutar y para que lo susodicho sea notorio y ninguno dello pueda pretender ignorancia mando que esta mi carta sea pregonada puacuteblicamente por las plazas y mercados y otros lugares acostumbrados desas dichas islas por prego-nero y ante escribano puacuteblico(Konetzke Coleccioacuten 23)135

Tambieacuten se sabe de las joyas que Rodrigo Ponce de Leoacuten marqueacutes de Caacutediz debioacute dar a dontildea Beatriz Pacheco (M Fernaacutendez de Navarrete 75 22) Lo que siacute queda claro es que la navegacioacuten seraacute a partir de estos antildeos la forma maacutes raacutepida e importante para comerciar con aquellos paiacuteses de Oriente que antes soacutelo era posible alcanzar a traveacutes de rutas terrestres Existe un documento muy representativo de este periodo sobre la posesioacuten de joyas de gran valor por parte de miembros de una de las familias maacutes repre-sentativas residentes en Ameacuterica Los protagonistas son en este caso el almirante Diego Coloacuten y su mujer Mariacutea de Toledo Dice el documento que El jurado Antoacuten Bernal y Juana de Hoces su mujer vecinos de Sevilla en la collacioacuten de Santa Cruz reciben de Diego Coloacuten Almirante de las Indias laquoun joyel muy rico de oro de hechura de escudo que tiene en medio una piedra preciosa grande esmeralda e debaxo de la dicha piedra un rostro de aacutengel labrado en el mismo oro esmaltado e a cada lado del dicho rostro una piedra preciosa diamante pura y debaxo una piedra gruesa pendiente que pesa el dicho

135 AGI Indiferente 418 Libro 2 fol 87v Publicada en DH Am Tom 6 paacutegina 191 DIA Tomo 31 pag 470 DIU Tomo 5 paacuteg 166 Seguacuten la RC a Diego Coloacuten fechada a 14 de noviembre de 1509 es la pragmaacutetica que se guarda en Castilla sobre la manera de vestir (DIU Tomo 5 paacutegina 174)

148 JUAN FRANCISCO MAURA

joyel con todo lo susodicho medio marcoraquo Los citados Antoacuten Bernal y su esposa se dan por pagados de todo lo que se les adeudaba y se obligan a su vez a devolver el joyel al Almirante si este les paga en dinero El 23 de agosto de 1530 siete antildeos despueacutes la virreina canceloacute la anterior obligacioacuten y recuperoacute el mencionado joyel (AHPS Libro del antildeo 1523 Oficio I Escribaniacutea Alonso de la Barrera Folio 1173 Fecha 3 de diciembre) En la misma casa del almirante otra mujer Briolanga Muntildeiz su tiacutea materna se obliga a pagar al mercader genoveacutes Batista Catantildeo 22 ducados de oro laquopor cierto raso que le comproacute y habiacutea de ser pagado en el puerto de Santo Domingoraquo (AHPS Libro del antildeo 1509 Oficio V Libro uacutenico Escribaniacutea Francisco Esquibel Folio Primer tercio del lega-jo Fecha 9 de marzo) Dontildea Briolanga recibiacutea cada antildeo para su mantenimiento 100000 maravediacutes del almirante mayor de las Indias por medio de Gaspar Gurricio monje del monasterio de Santa Mariacutea de las Cuevas (AHPS Libro 1510 Oficio XV Libro II Es-cribaniacutea Bernal Gonzaacutelez Vallesillo Folio primer tercio del legajo Fecha 4 de julio) Resulta interesante hacer notar la temprana presencia (1516) de un ingleacutes en Santo Domingo involucrado igualmente en la compra de telas Se trata de laquoNicolas Arnoteraquo residente en Santo Domingo que debe pagar a Mariacutea Caldera mujer del comendador Diego Barbosa el valor de una cama de sargas de colores de Flandes (AHPS Libro del antildeo 1516 Oficio XV Libro II Escribaniacutea Bernal Gonzaacutelez Vallesillo Folio Primer tercio del legajo Fecha 28 de agosto) Sin embargo anteriormente a esa fecha (1514) encontramos a un veneciano casado con una inglesa mucho maacutes ceacutelebre en sus viajes trasoceaacutenicos laquoSevastiaacuten Cavotoraquo capitaacuten del rey don Fernando y vecino de Sevilla136

De forma paralela se observa tambieacuten un cierto desenvolvimiento de la mujer en su medio lo que equivaliacutea a intercambios de informacioacuten a todos los niveles incluyendo por lo tanto el cultural No era extrantildeo que tuviesen libros de comedias a mano y que llegasen incluso a escribir comedias ellas mismas Efectivamente la sospecha de que las damas llegasen a escribir comedias estaba bien fundada Veacuteanse algunos ejemplos Ana Caro Malleacuten de Soto una de las maacutes famosas dramaturgas de la Sevilla del siglo XVII autora de El conde de Partinupleacutes utiliza el tema del amor en sus maacutes diversas variantes fiacutesicas y espirituales como el eje de casi todas sus obras (Perry 57) Este hecho por otra parte indica el favor del puacuteblico ante un tema tan popular Veacutease otro ejemplo

The drama of this period did not present love and marriage as a simple partnership however and many dramatists contrasted laquoprofaneraquo with laquohonestraquo love Feliciana Enriacutequez de Guzmaacuten who wrote Tragicome-dia Los jardines y campos sabeos in Seville in the early seventeenth cen-tury presented the hero Clarisel as the victim of laquopervertedraquo and fickle Belidiana in part 1 so blinded by her beauty that he feels himself laquoin shackles and in chainsraquo (Perry 57)

Pero las damas espantildeolas de esta eacutepoca no soacutelo escribiacutean comedias algunas tambieacuten se aventuraron a escribir tratados cientiacuteficos Uno de estos casos fue el de Oliva Sabu-co de Nantes Barrera que a finales del siglo xvi escribioacute un tratado meacutedico sobre la naturaleza humana advirtiendo que la lujuria podiacutea perjudicar al cuerpo Se basaba en

136 Sebastiaacuten Caboto o laquoSevastiaacuten Cavotoraquo estaba casado con Juana Cavoto vecina que fue de la ciudad de Londres en la parroquia de San Gil (AHPS Libro del antildeo 1514 Oficio I Libro II Escribaniacutea Mateo de la Cuadra Folio 253 Fecha 14 de Septiembre) citado en CFAAPS Vol 3 doc 128 p 37

149ESPANtildeOLAS DE ULTRAMAR EN LA HISTORIA Y EN LA LITERATURA

la presuncioacuten de que la lujuria provocaba que el cerebro emitiese un liacutequido que iba al estoacutemago enfriaacutendolo y debilitaacutendolo interrumpiendo de esta manera las funciones vitales (Perry 58)

Se sabe que en la eacutepoca de Isabel la Catoacutelica habiacutea muchas mujeres estudiantes y que la propia reina las impulsaba a estos menesteres iniciativa que obtuvo sus frutos en las deacutecadas siguientes Ademaacutes de las conocidas novelistas Mariacutea de Zayas y Sotomayor y dontildea Mariana de Carvajal existioacute toda una serie de escritoras de todos los geacuteneros lite-rarios que florecieron a ambos lados del Atlaacutentico y que no solamente llaman la aten-cioacuten por su nuacutemero sino por la calidad de sus obras Algunas de ellas como dontildea Luisa de Padilla condesa de Aranda calificada por Serrano y Sanz como laquola maacutes notable de cuantas florecieron en Espantildea en el siglo XVIIraquo personificaraacuten a la perfeccioacuten a este tipo de mujeres Tambieacuten deberiacuteamos saber cuaacutentas seriacutean las mujeres que escribieron con pseudoacutenimos masculinos

La informacioacuten sobre las diferentes facetas de la vida femenil con que contamos no es abundante A pesar de todo podemos hacernos una idea maacutes clara de la verdadera situacioacuten de la mujer a traveacutes de una nueva interpretacioacuten de los textos tanto de los medievales como de las croacutenicas de los primeros antildeos del descubrimiento y conquista Algunos estudios relativamente recientes surgidos por el intereacutes general que suscita todo lo concerniente a la mujer han ayudado a considerar nuevas perspectivas La eru-dicioacuten moderna estaacute poniendo en tela de jucio los estereotipos tradicionales en cuanto a la pasividad y relevancia femeninas asiacute como al tradicional misogenismo que se atri-buye a la eacutepoca medieval Cada vez estaacute maacutes claro que la existencia de estas mujeres variaba considerablemente seguacuten la eacutepoca posicioacuten social o situacioacuten geograacutefica por lo que hacer valoraciones categoacutericas sobre laquola situacioacuten de la mujerraquo puede llevar a graves equivocaciones (Dillard 9) Es fundamental para comprender a la mujer espa-ntildeola que pasoacute al Nuevo Mundo tener en cuenta las enormes diferencias de todo tipo que existieron en la sociedad castellana y novomundista Un pintoresco ejemplo es el de laquolas tapadasraquo una usanza de origen aacuterabe que se pondriacutea de moda en Castilla poco despueacutes de la toma de Granada por los Reyes Catoacutelicos y que despueacutes pasariacutea al Peruacute Esta tradicioacuten ha perdurado en algunos pueblos de Espantildea hasta relativamente poco tiempo pueblos como Mojaacutecar (Almeriacutea) y Vejer de la Frontera (Caacutediz) son ejemplo de esta costumbre tambieacuten conocida como el de las laquocobijaacutesraquo

Tras la caiacuteda del reino musulmaacuten de Granada en 1492 la corona espa-ntildeola prohibioacute a las mujeres aacuterabes de Andaluciacutea vestir los velos islaacutemi-cos que cubriacutean sus rostros y ocultaban su identidad No era faacutecil des-arraigar esta costumbre tan ancestral y secular y el emperador Carlos asiacute como su hijo el rey Felipe II tuvieron que repetir la prohibicioacuten Cuando finalmente las moras fueron obligadas a abandonar sus velos y a adoptar el chal castellano comenzaron a utilizar la nueva prenda para cubrir sus rostros dejando al descubierto soacutelo uno de los ojos Esta nueva moda en el uso del chal tradicional nos asegura leoacuten Pi-nelo era extremadamente graciosa sensual y atractiva a causa de la belleza exoacutetica de los ojos de las moras Las mujeres cristianas de Granada Coacuterdoba y Sevilla imitaron pronto la nueva moda de llevar el chal y asiacute nacioacute la laquotapadaraquo hispana Desde Sevilla la nueva moda

150 JUAN FRANCISCO MAURA

fue a las colonias de ultramar y tomoacute raices especialmente en el Peruacute (Martiacuten 317-18)

En un reciente estudio sobre la educacioacuten de la mujer en la Ameacuterica virreinal apare-cen algunos ejemplos significativos de mujeres espantildeolas que consagraron gran parte de sus vidas a la tarea docente Dentro del proceso educativo de las espantildeolas que fueron a las Indias destaca el papel de dontildea Catalina de Bustamante Joseacute de Jesuacutes Vega y Ma-riacutea Luisa Caacuterdenas de Vega dicen en su obra Ameacuterica Virreinal La Educacioacuten de la mujer que esta mujer pocos antildeos despueacutes del descubrimiento del Nuevo Mundo se dedicoacute a trabajar en favor de los indios aunque por desgracia su nombre y sus hechos en la labor docente hayan sido ignorados por los historiadores modernos (Vega 12-13)

Son varias las veces que se nombra a Catalina de Bustamante en el citado estudio y varias las fuentes antiguas en que se recoge la presencia de tan distinguida laquomatrona muy honrada y de buen ejemploraquo de la que ya hablaba Zumaacuterraga y sobre la que se hizo un informe enviado a Carlos V describiendo sus actividades en la Nueva Espantildea firmado por cuatro de los misioneros maacutes conocidos de Meacutexico

El informe dice que los franciscanos de Texcoco acababan de cons-truir un nuevo monasterio y cedido el antiguo A una honrada y honesta y muy virtuosa matrona que se dice Catalina de Bustamante para que ende instruyese a las hijas de los sentildeores de la comarcala cual con el favor de Dios y limosnas que don Hernando [Corteacutes] les haciacutea para su sustentacioacuten [teniacutea en esa casa-hogar] hasta trescientas mujeres antes maacutes que menos (Vega 14)

Estas laquocasas-hogarraquo no estaban regentadas necesariamente por monjas sino por lo que llamaban laquobeatasraquo mujeres que sin estar estar sujetas a la autoridad eclesiaacutestica se dedicaban a un laquolucro honestoraquo Llamadas tambieacuten laquobeateriosraquo eran diferentes a los conventos de monjas y constituiacutean las primeras escuelas de la mujer en la Nueva Espa-ntildea (Vega 20-21) Fue gracias al ejemplo de mujeres como Catalina de Bustamante que dedicaron sus vidas a la educacioacuten de los indiacutegenas que existiesen otras continuando su ejemplo Motoliniacutea dice claramente que laquode ese primer encerramiento (el de Texcoco regentado por Catalina) salieron otras honestas y muy virtuosas duentildeas que ensentildeaban a las maacutes menudasraquo (Vega 23)

Pero dontildea Catalina de Bustamante pese a ser una singular mujer y la iniciadora de la educacioacuten de la mujer en Meacutexico no fue un caso aislado corresponde maacutes bien a un patroacuten al que se ajustaron muchas de las pioneras de la Nueva Espantildea que sembraron instituciones de educacioacuten de la mujer En 1530 unos antildeos maacutes tarde aparecioacute una de las grandes protectoras de la instruccioacuten femenina en Ameacuterica La emperatriz Isabel de Portugal (Vega 24)

Desde comienzos de la conquista fueron varios los centros docentes regentados por mujeres en los que la ensentildeanza no estaba impartida por monjas Una de las institucio-nes maacutes sobresalientes del sistema educativo fue el Colegio de Nintildeas que se establecioacute en la ciudad de Meacutexico a principios del siglo XVI con maestras que no eran monjas Estas seglares conocidas comunmente como laquomigasraquo eran las descendientes de las antiguas beatas Su ubicacioacuten permanente fue determinada en 1548 lugar que serviriacutea de escue-la ininterrumpidamente hasta 1862 cuando el edificio fue convertido en bodega (Vega 60) No se debe perder de vista que no soacutelo por el hecho de llevar una vida secular se

151ESPANtildeOLAS DE ULTRAMAR EN LA HISTORIA Y EN LA LITERATURA

gozaba de maacutes privilegios Era maacutes bien al contrario En las carreteras las mujeres segla-res no inspiraban el mismo respeto que las monjas que ademaacutes teniacutean contacto cons-tante con personas de los dos sexos no pertenecientes a la Iglesia (Arenal 297) Ademaacutes dentro de las murallas del convento desapareciacutean muchas de las barreras sociales que limitaban a la mujer de esta eacutepoca

La presencia femenina y la monarquiacutea

Pues iquestcoacutemo sabes tuacute preguntoacute don Quijote que los grandes llevan detraacutes de siacute a sus caballerizos Yo seacute lo direacute respondioacute Sancho Los antildeos pasados es-tuve un mes en la corte y alliacute vi que paseaacutendose un se-ntildeor muy pequentildeo que deciacutean que era muy grande un hombre le seguiacutea a caballo a todas las vueltas que daba que no pareciacutea que era su rabo Pregunteacute que coacutemo aquel hombre no se juntaba con el otro sino que siempre anda-ba tras deacutel Respondieacuterome que era su caballerizo y que era uso de grandes llevar tras siacute a los tales Desde enton-ces lo seacute tan bien que nunca se me ha olvidado (Cervan-tes Don Quijote)

Los monarcas espantildeoles fueron conscientes de que sin la presencia femenina difiacute-cilmente se podriacutea solidificar una conquista a todos los niveles La mayor parte de los virreyes y altos cargos trajeron a sus mujeres con ellos y en las ciudades principales de Hispano-Ameacuterica como la ciudad de Meacutexico Guatemala Lima o Potosiacute habiacutea mujeres que disfrutaban de una esmerada educacioacuten (gramaacutetica latiacuten poesiacutea historia muacutesica) Esto dariacutea origen a una elegante y hasta cierto punto sofisticada sociedad en la que las mujeres tomaron parte en asuntos maacutes importantes que los que sus homoacutelogas toma-ran en las colonias portuguesas laquoThere were brilliant vice-regal courts at Mexico City and Lima far exceeding anything that could be found in Portuguese or English America during the seventeenth centuryraquo (Boxer 39) Las estadiacutesticas con las que contamos hoy no soacutelo demuestran que las mujeres llegaron al Nuevo Mundo en respetables porcen-tajes sino que ademaacutes tuvieron una participacioacuten activa llegando a intervenir en algu-nos casos en las liacuteneas de vanguardia Resulta difiacutecil aproximarse al estado de aacutenimo de aquellas mujeres que vivieron en eacutepocas tan lejanas Para ello es necesario indagar en los documentos de la eacutepoca para lograr rescatar del pasado todos esos tesoros de la historia muchas veces tergiversados y manipulados con el fin de que sirvan a propoacutesi-tos actuales Es en los viejos manuscritos donde queda testimoniada su presencia tan rica en dolores tragedias y por queacute no en amores Fue la llegada de estas mujeres una brisa de esperanza y de ilusioacuten para aquellos que ya estaban en las tierras de ultramar y

152 JUAN FRANCISCO MAURA

veiacutean venir de su propia tierra aquello que maacutes antildeoraban amantes madres hermanas Un haacutelito de vida y poesiacutea que suavizaba las costumbres de estos rudos y romaacutenticos pioneros laquoporque para ser hombres de tales empresas algo de romaacutentico debioacute de existir en ellos y que es tan propio del espantildeol y abandonariacutean en brazos tan gentiles sus bruscos modales que habiacutean adquirido en aacutespero contacto en selvas y montantildeasraquo (Villafantildee 125)

Hoy sabemos que en la normativa oficial de la Espantildea del siglo XVI y XVII se favoreciacutea el paso de mujeres al Nuevo Mundo Afirmar lo contrario no solamente es falso sino que implica un desconocimiento total de los primeros dos siglos de la colonizacioacuten espantildeola La presencia de estas mujeres espantildeolas fue efectiva laquolas disposiciones al respecto demuestran claramente que se teniacutea especial intereacutes en su arraigo y que se tra-taba de defender su posicioacuten de mujeres casadas con conquistadores y colonizadoresraquo (Villafantildee 126) Los monarcas comprendiacutean que era praacutecticamente imposible que los hombres viviesen sin mujeres y que de ser asiacute era de esperar que se cometiesen abusos con las indias lo que incidiriacutea en la moral social y en el buen gobierno de la colonia Ademaacutes sin un asentamiento definitivo con hogares y familias difiacutecilmente se podriacutea llevar a cabo una presencia permanente en las nuevas colonias (Orsquo Sullivan-Beare 45)

Empezando por los Reyes Catoacutelicos la preocupacioacuten de que en las colonias se esta-bleciesen nuacutecleos que tuviesen como base la familia cristiana fue clara Las capitulacio-nes que a este efecto se hicieron entre los conquistadores y la Corona fueron nume-rosas La efectuada entre Rodrigo de Baacutestidas y Carlos V puede ser un buen ejemplo Fechada en Valladolid el 6 de noviembre de 1524 muestra el propoacutesito de Baacutestidas de establecer una colonia permanente en la desembocadura del riacuteo Magdalena en el terri-torio que hoy vendriacutea a corresponder a Colombia El documento firmado por el Empe-rador comienza asiacute

El Rey Por cuanto por parte de vos Rodrigo de Baacutestidas vecino de la ciudad de Santo Domingo de la Isla Espantildeola Me fueacute fecha relacioacuten que por servicio de la Catholica Reyna Mi Sentildeora e Nuestro os ofre-ceacuteis de poblar e poblariades la provincia e puerto de Santa Marta que en Castilla de Oro llamada la Tierra Firme e que la poblariades dentro de dos antildeos siguientes haciendo en ella un pueblo en que no menos haya en eacutel al presente cincuenta vezinos que los quince de ellos sean casados y tengan consigo a sus mujeres y que lo teniades fecho dentro de dos antildeos y de hoy en adelante lo maacutes que fuese posible asiacute de cris-tianos espantildeoles como de indios (Restrepo 1 30)

De igual manera el priacutencipe Felipe (futuro Felipe II) en las capitulaciones establecidas en 1547 con Juan de Sanabria para que eacuteste fuese como gobernador y capitaacuten general de la dicha provincia escribe lo siguiente laquoPrimeramente que seais obligado e os obligeis a llevar destos Reynos de Castilla a la dicha provincia del Rio de la Plata cien casados con sus mujeres e hijos para poblar la dicha provincia y con ellos llevareis a vuestra muger e hijos (CDI de Ameacuterica y Oceaniacutea 23 119)

En numerosas ocasiones se pone de manifiesto el apoyo de la monarquiacutea a la emigra-cioacuten femenina tantas que difiacutecilmente se podriacutean enumerar todos los casos Lo cierto es que la legislatura vigente favoreciacutea la emigracioacuten y traslado de mujeres con toda una se-

153ESPANtildeOLAS DE ULTRAMAR EN LA HISTORIA Y EN LA LITERATURA

rie de alicientes137 sobre todo si eacutestas estaban casadas pasaje para llevar a las familias franquicia de derecho para los artiacuteculos que portasen consigo favoritismo en cargos destinos y contrataciones a aquellos que pasasen con sus mujeres incluyendo ademaacutes de los castellanos y leoneses a suacutebditos de otras partes de la corona incluso genoveses y portugueses si estos veniacutean acompantildeados de sus consortes (Fernaacutendez Duro 15-16)

Incluso se llegoacute a imponer penas a aquellos hombres casados que no llevasen a sus mujeres con ellos a Indias en el teacutermino de un antildeo El mismo emperador en una ceacutedula otorgada al virrey de la Nueva Espantildea le recomendaba que laquoprocurase persuadir a ca-sarse a los solteros que estuviesen en edad y situacioacuten de hacerloraquo prometieacutendoles que al efectuar el matrimonio seriacutean preferidos en el reparto de indios En la isla de San Juan de Puerto Rico los cargos oficiales y oficios puacuteblicos debiacutean de ser desempentildeados por los casados en primer lugar En Meacutexico ocurrioacute lo mismo con los cargos de corregido-res (Konetzke laquoemigracioacutenraquo 140-41) Felipe II al igual que sus antecesores y sucesores reiteraraacute y justificaraacute los beneficios de los que seraacuten acreedores aquellos que tengan allaacute a sus mujeres laquoque los que han servido en los descubrimientos de las dichas Indias y tambieacuten los que ayudan a la poblacioacuten dellas que tienen allaacute sus mugeres sean preferi-dos en los aprouechamientos qualesquierraquo mandando que despueacutes de los conquistado-res se tuviera en cuenta para la laquoprovisioacuten de los corregimientosraquo a los colonos casados siempre que estuvieran capacitados para dichos cargos (Konetzke laquoemigracioacutenraquo 141)

Las disposiciones en favor del matrimonio son claras ya sea por medio de un favo-ritismo manifiesto como en los casos antes citados o mediante medidas de cohercioacuten para que esta poliacutetica se llevase a cabo Don Sebastiaacuten Ramiacuterez de Fuenleal obispo de Santo Domingo y presidente de la Audiencia de Meacutexico propuso que a aquellos enco-menderos que no estuviesen casados y que no hubiesen tomado parte en la conquista se les quitase los indios concedidos con la obligacioacuten de devolveacuterselos si en el plazo de un antildeo habiacutean contraiacutedo matrimonio (Konetzke laquoemigracioacutenraquo 142-43) Por supuesto hubo excepciones a estas reglas En algunos casos ni la mujer teniacutea especial intereacutes en vivir junto con su marido en las Ameacutericas ni el marido queriacutea ir a buscar a su mujer pasado el plazo de un antildeo En el presente documento y de forma excepcional las auto-ridades reales protegen a los conyuges para que puedan seguir viviendo separados en continentes diferentes

Nuestras justicias de la ysla de Cubagua e otras qualesquier de las nuestras Yndias yslas e tierra firme del mar oceacuteano e a cada uno e qualquier de vos a quieacuten esta mi ceacutedula fuese mostrada por parte de Alonso de Tapia nuestro veedor de la provincia de Paria me ha sido hecha relacioacuten que ha mucho tiempo que reside en esas partes donde nos ha servido en lo que se ha ofrecido e que agora vos otros le apre-miaacuteis a que venga o embiacutee a estos Reinos por su muger lo cual no puede al presente hazer a causa de no ter posibilidad para ello a mi me ha suplicado vos mandase que no le compeliacuteesedes ny apremiaacutesedes a que viniese o enviase por la dicha su muger y dieacutesedes por libres los fiadores que tenyades para que dentro de un antildeo embiariacutea o verniacutea por

137 Reales Ceacutedulas de los antildeos 1502 y 1503 Academia de la Historia Coleccioacuten Muntildeoz tomo 75 fols 209 y 220 citado por Fernaacutendez Duro 15

154 JUAN FRANCISCO MAURA

ella o como la mi merced fuese lo cual visto por los de nuestro consejo juntamente con una peticioacuten presentada por dontildea Mariacutea Gudiel muger del dicho Alonso de Tapia por la cual nos suplica lo mismo que acor-dado que debiacutea mandar esta mi ceacutedula para vos por la qual vos mando que no compelaacuteis ni apremieacuteis al dicho Alonso de Tapia a que venga ni enviacutee a estos reinos por la dicha su muger si no fuere a que la pro-vea de lo que fuere necesario para su mantenimiento y deys por libres quales quier fianzas que sobre ello haya dado e no fagades ende al por alguna manera Firmado en la villa de Valladolid a VII diacuteas del mes de febrero de mil e quinientos e treinta y siete antildeos yo el licenciado Con-de de Samano y sentildealada del cardenal Beltraacuten y Carbajal [Aparte en letra pequentildea] Este diacutea se despachoacute una provisioacuten por la cuaacutel su Mag hizo merced a Alonso de Tapia de la veedoriacutea de la provincia de Paria por muerte de Garciacutea de Aguilar con las clausulas ordinarias y con el mismo salario que teniacutea Aguilar Firmado del emperador y de Beltraacuten y Bernal y Velaacutezquez El Rey (Registro de disposiciones Riacuteo Marantildeoacuten AGI Indiferente General Legajo 416 libro 2 Fols 94v y 95r)

El punto maacutes interesante a destacar de todas estas disposiciones oficiales en cuanto a la emigracioacuten femenina al Nuevo Mundo no es otro que la libertad que se da a la mujer de decidir si quiere o no casada o sin casar trasladarse al nuevo continente no como una imposicioacuten sino como un precepto laquoel espiacuteritu de las disposiciones en el sentido de asegurar la vida marital de los casados significa que la mujer que su marido invita a pa-sar a las Indias puede negarseraquo (Villafantildee 127) Habriacutea que ver las opciones laquorealesraquo ade-maacutes de las legales y econoacutemicas que le quedaban a la mujer si tomaba esta decisioacuten

El saber la libertad de eleccioacuten que estas mujeres teniacutean de antemano antes de aden-trarse en las interminables penalidades y aventuras que los viajes de la navegacioacuten tran-soceaacutenica suponiacutean hace que sus hechos y esfuerzos cobren auacuten maacutes relieve En nume-rosas ocasiones estas mujeres cruzaron el oceacuteano una y maacutes veces sin otro motivo que el de defender los derechos e intereses de los suyos Lo que resulta maacutes valioso de todo esto es que lo hicieran por propia iniciativa arriesgando sus vidas para que se hiciese justicia y para que no les faltase lo necesario a aquellos que estaban en la otra orilla Las autoridades vigentes conocedoras de los vaciacuteos legales existentes en las nuevas colo-nias se apresuraron a poner en vigor aquellas normas que redundaran en el beneficio de los menos favorecidos por las circunstancias La institucioacuten del matrimonio cuya trans-cendencia es fundamental en la vida juriacutedica y social de la mujer tuvo que ser legislada en Ameacuterica con una serie de nuevas disposiciones agregados modificaciones y aclara-ciones Asiacute pues la legislacioacuten de base espantildeola tuvo que sufrir en tierras americanas esta serie de cambios por motivos poliacuteticos y sociales (Villafantildee 126)

Para hacer un sumario de lo dispuesto hasta el siglo XVI en cuanto a la legislacioacuten de las mujeres que teniacutean familia o intereses en Indias merece la pena mencionar que existieron una serie de disposiciones que protegiacutean a las mujeres para que eacutestas no se viesen abandonadas por sus maridos En un epiacutegrafe de la Recopilacioacuten de 1680 (libro VII tiacutetulo 3) se deja ver claramente la preocupacioacuten de las autoridades en este asunto laquoDe los casados en Espantildea e Indias que estaacuten ausentes de sus mujeres y esposasraquo (Vi-llafantildee 126-27)

155ESPANtildeOLAS DE ULTRAMAR EN LA HISTORIA Y EN LA LITERATURA

La lista de disposiciones se hace interminable En los reinados de Fernando el Catoacute-lico Carlos V Felipe II Felipe III o incluso Carlos II la insistencia es constante La ra-zoacuten de esta insistencia seriacutea bastante obvia dado que con un oceacuteano por medio seriacutean muchos los que se aprovechasen de llevar una doble vida marital sin el estricto control y vigilancia de sus mujeres que se encontraban en la peniacutensula La ley XXVII libro IX tiacutetulo XXVI determina laquoDeclaramos por personas prohibidas para embarcarse y pasar a las Indias todos los casados y desposados en estos reinos lsquosino llevaren con ellos sus mujeresrsquo aunque sean virreyes oidores gobernadores o nos fuesen a servir en cual-quier cargo y oficios de Guerra Justicia y Hacienda porque es nuestra voluntad que todos los susodichos lleven a sus mujeresraquo (Villafantildee 127) laquoLos eclesiaacutesticos eran los en-cargados de dar cuenta a los tribunales competentes de aquellos que estando casados permaneciacutean en Indias sin sus mujeres Son reiteradas las disposiciones de Fernando el Catoacutelico en este sentidoraquo138 En 1514 el rey don Fernando ordena en una provisioacuten para la isla Espantildeola laquodoy licencia eacute facultad aacute cualquier persona naturales de estos Reynos para libremente se puedan casar con mujeres naturales de esa dicha ysla sin tener que incurrir por ello en pena algunaraquo (Villafantildee 129)

No se debe olvidar tampoco a aquellas mujeres que decidieron pasar a las laquonuevas tierrasraquo solteras Estas mujeres tambieacuten tuvieron un papel importante en el desarrollo de las nuevas colonias Los organismos espantildeoles del momento como los mandatarios indianos y todos los cronistas no dejaron pasar desapercibida la importancia social de estas mujeres en la poliacutetica de poblamiento laquo[E]s cierto que los pueblos de Indias nuevamente poblados no se tienen por fijos o estables ni permanentes hasta tanto que mujeres espantildeolas entren en ellos y los encomenderos y conquistadores se casen por muchas causas y respetos buenos y saludables que para ello hayraquo (Villafantildee 126-27)

Si la intencioacuten era la de una presencia permanente en las tierras americanas la mujer soltera que pasase a ellas siempre seriacutea un motivo maacutes para el colono o conquistador de continuar en el mismo suelo Se podriacutea empezar una familia si asiacute se quisiese sin tener que pensar en volver a la metroacutepoli ya fuese a disfrutar de los bienes adquiridos o a laquobuscarraquo una esposa El problema aparecioacute cuando se produjo un exceso de mujeres solteras lo que de alguna manera alteroacute la estructura social existente ya que no habiacutea muchas opciones para ellas aparte del matrimonio o el convento

En consideracioacuten a que la experiencia habiacutea demostrado que un exce-sivo nuacutemero de mujeres ejerciacutea perniciosa influencia sobre la moral y las costumbres se suplicaba al rey no otorgase a aquellas tantas auto-rizaciones para emigrar al Peruacute La ciudad de la Plata fundada en 1538 emite en 1577 un informe en el que se expone la urgente necesidad de que se funde un convento de monjas pues en el territorio de las Au-diencias de Los Charcas existiacutea un gran nuacutemero de muchachas que no pudieacutendose casar se hallaban en gran peligro de perderse (Konetzke laquoemigracioacutenraquo 149)

138 Solorzano Pereira Juan de Libro Primero de la Recopilacioacuten de las Ceacutedulas Reales Cartas y Provisiones y Or-denanzas Reales Noticia preliminar de Ricardo Levenne Universidad de Buenos Aires Facultad de Derecho Y Ciencias Sociales Pub del Instituto de Historia del Derecho Argentino Coleccioacuten de Textos y Documentos para la Historia del Derecho Argentino t V Buenos Aires Imp de la Universidad de Buenos Aires 1945 (Li-bro I Ley 10 laquoQue los Espantildeoles puedan casar con Indias y al contrario a su voluntadraquo t2 p 138 citado en Villafantildee 129

156 JUAN FRANCISCO MAURA

Entristece ver coacutemo se manejan las cifras de estas mujeres como si de ganado o de bienes suntuarios se tratase Por otra parte existieron irregularidades como la de pobla-doras espantildeolas que vivieron amancebadas con hombres que ya estaban casados en la peniacutensula Normalmente esto ocurriacutea cuando la estancia del conquistador se prolonga-ba maacutes de lo debido en lugares donde habiacutea pocas espantildeolas Muchas veces nacieron hijos de estas uniones que hicieron auacuten maacutes difiacutecil la situacioacuten para las mujeres que esperaban en Espantildea a un marido que ya no teniacutea ningunas intenciones de volver En los juicios de residencia los documentos acostumbran a citar estos casos ya que era parte de su obligacioacuten castigar las irregularidades extramatrimoniales y salvaguardar las buenas costumbres familiares que con tanto intereacutes se deseaba mantener laquoUn ejemplo nos lo da la isla de Cuba donde en 1532 viven con hombres casados Olalla Hernaacuten-dez Santillana Aranda lsquola Cordobesarsquo Catalina de Leoacuten Catalina Saacutenchez Francisca Hernaacutendez Mayor de Azebedo Juana de Valeros y lsquouna mujer que estaba en casa de Ayalarsquoraquo (Borges 416)

Estos casos no fueron aislados y mucho menos en Cuba centro neuraacutelgico de todo el movimiento de ida y vuelta entre la metroacutepoli y el Nuevo Mundo Estas ocho acusa-ciones por lo tanto no tienen porqueacute considerarse extraordinarias y menos en el lugar maacutes cosmopolita de las Indias en esos momentos al que llegaban flotas a cada momen-to Al parecer existieron casos parecidos en el Riacuteo de la Plata Peruacute y Nueva Espantildea (Ratcliffe 347) El margen legal para que estas mujeres viviesen como quisiesen estuvo limitado por una moral que veiacutea uacutenicamente en el matrimonio o el convento una salida laquovaacutelidaraquo para que fueran aceptadas socialmente Los hombres en iguales circunstan-cias fueron juzgados por una laquomoralraquo mucho maacutes permisiva

La mujer y el cuerpo eclesiaacutestico

Pues iquestquieacuten diablos os traiacutedo aquiacute dijo don Quijote siendo hombre de la iglesia iquestQuieacuten sentildeor replicoacute el caiacutedo laquomi desventuraraquo Pues otra mayor os amenaza dijo don Quijote sino me satisfaceacuteis a todo cuanto primero os pregunteacute (Cervantes Don Quijote )

Otro factor a tener en cuenta en un anaacutelisis sobre la presencia de la mujer en el Nuevo Mundo es el que tiene que ver con la institucioacuten maacutes importante de las que llegaron desde Europa la iglesia catoacutelica Sin aacutenimo de criticar a tan compleja institucioacuten res-ponsable de gran parte de los aconteceres en el Nuevo Mundo vale la pena analizar algunas singularidades Muchos de sus miembros fueron grandes ejemplos de valor e inteligencia a la hora de tratar los maacutes variados y escabrosos asuntos con los que se encontraron los cristianos en la otra orilla durante este periacuteodo Se debe resaltar tam-

157ESPANtildeOLAS DE ULTRAMAR EN LA HISTORIA Y EN LA LITERATURA

bieacuten su caraacutecter medieval en la manera de hacer apostolado y de entender y tratar a los potenciales cristianos Si se tienen en cuenta los privilegios y prerrogativas que algunas de las altas jerarquiacuteas eclesiaacutesticas tuvieron no seriacutea superfluo estimar que un respeta-ble porcentaje de la poblacioacuten de origen laquodudosoraquo muy bien podiacutea venir de la misma iglesia Fueron muchas las viacutectimas y muchas las familias divididas por un padre laquoinvi-sibleraquo Gran parte de los hijos o laquosobrinosraquo de estos sacerdotes pasaron a ocupar cargos similares incluyendo los privilegios que estos cargos llevaban consigo como si se trata-se de cualquier otro oficio gremial transmitido generacionalmente regla tan comuacuten en la Europa medieval Todaviacutea a finales del siglo XIII en Espantildea los derechos de los hijos y nietos de los sacerdotes estaban protegidos por la ley sin que hubiesen podido ser erradicados por las reformas gregorianas (Ratcliffe 347)139

Las letras espantildeolas ya se haciacutean eco de estos lances amorosos entre representantes de la Iglesia y ciertas damas del lugar desde los tiempos del poeta riojano Gonzalo de Berceo En su obra maacutes conocida Los milagros de Nuestra Sentildeora Berceo describe con un realismo ingenuo y sencillo relatos de humor y de humanismo sobre aquellos hombres de carne y hueso que eran perdonados por la intercesioacuten de la Virgen Mariacutea Juan Ruiz por su lado haraacute de su Libro de buen amor la obra maacutes representativa en este sentido Seriacutea prolijo recordar la actuacioacuten de la Iglesia durante diversos periacuteodos de la Edad Media no soacutelo en Espantildea sino en toda Europa En la Espantildea musulmana del siglo XII concretamente en Sevilla el comportamiento de los representantes de la iglesia cristia-na (mozaacuterabe) en territorio islaacutemico es duramente criticado por el sevillano Ibn Abdun Este precioso documento muestra el estricto control y falta de confianza que existiacutea sobre la mujer prohibieacutendolas que entrasen en las laquoabominablesraquo iglesias cristianas

porque los cleacuterigos [cristianos] son libertinos fornicadores y sodomi-tas Asimismo debe prohibirse a las mujeres francas que entren en la iglesia maacutes que en diacuteas de funcioacuten o fiesta porque alliacute comen beben y fornican con los cleacuterigos y no hay uno de ellos que no tenga dos o maacutes de estas mujeres con que acostarse Han tomado esta costumbre por haber declarado iliacutecito lo liacutecito y viceversa Convendriacutea pues mandar a los cleacuterigos que se casasen como ocurre en Oriente y que si quie-ren lo hagan (Leacutevi-Provenccedilal 150)

Pese a existir una convivencia paciacutefica durante gran parte de la Edad Media entre los tres credos monoteiacutestas de Espantildea (cristianos musulmanes y judiacuteos) esto no suponiacutea que no existiese desprecio y desconfianza entre estos grupos religiosos Dice Abdun resaltando el peligro que suponiacutea que una mujer entrase en casa de un cleacuterigo cristiano de vida ceacutelibe

No debe tolerarse que haya mujer sea vieja o no en casa de un cleacuterigo mientras eacuteste rehuacutese casarse Obliacutegueseles ademaacutes a circuncidarse co-mo les obligoacute al-Mutadid pues si a lo que dicen siguen el ejemplo de Jesuacutes (iexclDios les bendiga y salve) Jesuacutes se circuncidoacute y precisamente ellos que han abandonado esta praacutectica tienen una fiesta que celebran solemnemente el diacutea de su circuncisioacuten (Leacutevi-Provenccedilal 150-151)

139 Valdriacutea la pena ver si han cambiado mucho las cosas desde hace quinientos antildeos a esta parte o si in-cluso la iglesia moderna ha retrocedido en tolerancia en cuanto a las relaciones sexuales de los representantes de la Iglesia

158 JUAN FRANCISCO MAURA

El historiador argentino Germaacuten Arciniegas recoge un pasaje ilustrativo de lo men-cionado anteriormente pero trasladado al ambiente de la colonia diciendo que incluso en poblaciones pequentildeas como Santa Fe con poco maacutes de un convento y una ermita la fragilidad de la carne enredaba a frailes soldados y virreyes por igual laquoEl buen So-liacutes que murioacute en olor de santidad con la cabeza reclinada sobre un par de ladrillos y en saya de franciscano cruzaba en las noches el solar de su palacio para ir a besar a la Marichuelaraquo (118-19)

Arciniegas recoge tambieacuten un suceso aparecido en el diario de Lima en 1667 que no tuvo que ser extraordinario durante los primeros antildeos de la colonia laquoEl fraile carmelita mdashGrande hereje y siendo sacerdote deciacutea misa gran perro lujurioso deshonesto que relatando sus maldades dijo que en cierta ciudad habiacutea conocido carnalmente a maacutes de trescientas y sesenta mujeres y en un convento de monjas habiacutea cometido muchos sacrilegios Este lo trujeron preso de Buenos Aires por Chileraquo (119)

Las controversias de la iglesia moderna sobre las relaciones que los eclesiaacutesticos de-ben tener con el sexo femenino parece que no han encontrado todaviacutea respuesta Sigue existiendo miedo y recelo a que la mujer comparta no soacutelo poder en la jerarquiacutea de la iglesiacutea sino en la vida privada de los miembros de la institucioacuten En la Nueva Espantildea el primer obispo de Meacutexico Juan de Zumaacuterraga viendo en la mujer un ser de tentacioacuten irresistible prohibioacute terminantemente la presencia de eacutestas en su casa Ni siquiera para su limpieza y aseo El franciscano Juan de Torquemada se refiere a este comportamien-to como una de las virtudes del popular obispo

Fue este benditiacutesimo prelado muy amigo de la virtud y de virtuosos y aceacuterrimo reprehendedor de vicios y viciosos y tan enemigo de la ociosidad que no permitiriacutea que alguno de su casa estuviese ocioso fue amiciacutesimo de la limpieza por lo cual jamaacutes consintioacute que mujer alguna entrase en su casa aunque fuese necesaria al servicio de ella ni nunca consintioacute que por alguna ocasioacuten subiese mujer a lo alto y aposentos de ella antes lo teniacutea todo cerrado como un monasterio porque sabiacutea (como quien tambieacuten sabiacutea) que la ocasioacuten suele derribar los maacutes fuertes y robustos corazones (450 lib 20 cap 31)

No fueron uacutenicamente miembros de la iglesia catoacutelica los que valoraron la lucha con-tra la tentacioacuten siguiendo al pie de la letra el crudeliacutesimo refraacuten laquoentre santa y santo pared de cal y cantoraquo Se tienen algunas noticias de la vida social de los primeros tiem-pos de la colonia En estos documentos se puede observar coacutemo no distaban mucho las oacuterdenes que se dictaban en la metroacutepoli y las que se llevaban a cabo en la Nueva Espantildea La vida social tanto de damas como de algunos miembros de la iglesia de las colonias era maacutes laquorelajadaraquo de lo que las normas permitiacutean Gracias a la informacioacuten ofrecida por Manuel Romero de Terreros disponemos de los nombres de las primeras virreinas

Las esposas de los primeros cinco Virreyes Don Antonio de Mendoza Don Luis de Velasco Don Gastoacuten de Peralta Don Martiacuten Enriacutequez de Almanza y Don Lorenzo Suaacuterez de Mendoza Conde de la Coruntildea fueron respectivamente Dontildea Caterina de Vargas Dontildea Ana de Cas-tilla y Mendoza hija de Don Diego de Castilla Sentildeor de Gor y Caba-

159ESPANtildeOLAS DE ULTRAMAR EN LA HISTORIA Y EN LA LITERATURA

llerizo de Carlos V Dontildea Leonor de Vieo Dontildea Mariacutea Manrique hija del Marqueacutes de Aguilar y Dontildea Catalina de la Cerda hija del segundo Duque de Medinaceli (Romero 2)

Existen noticias concretas de la seacuteptima virreina de la Nueva Espantildea (1586) dontildea Blanca de Velasco marquesa de Villamanrique En ellas destaca lo anteriormente men-cionado sobre la falta de tolerancia existente en aquellos tiempos difiacutecilmente com-prensible si no fuera por fragmentos esporaacutedicos conservados sobre la vida colonial en la Nueva Espantildea En la siguiente Relacioacuten hecha por autores anoacutenimos sobre la visita que hizo Fray Alonso Ponce Comisario General de la Orden Seraacutefica a las provincias de la Nueva Espantildea se mencionan las eneacutergicas medidas que con los miembros de su orden en su opinioacuten de moral laquomuy relajadaraquo tomoacute este religioso Tambieacuten aparecen mencionadas sus relaciones con la Virreina

Captoacutese ademaacutes la enemistad del gobernante y de la Virreina Dontildea Blanca de Velasco hija del cuarto Conde de Nieva sentildeora seguacuten pare-ce de conducta ligera y caraacutecter maacutes que dominante laquoPor este mismo tiempo (septiembre de 1586) fueron el Virey y la Vireyna a holgarse y recrearse en la cibdad de Xochimilco Posoacute con toda su casa dentro de nuestro convento en un dormitorio deacutel y detuacutevose alliacute siete u ocho diacuteas en que los indios les hicieron grandes fiestas aunque les costaron caras porque en una dellas murieron dos o tres dellos con un tiro que se disparoacute y reventoacute y al principal indio de aquella cibdad hirieron muy malraquo (Romero 3-4)

A pesar del riacutegido control eclesiaacutestico y civil que habiacutea en la Nueva Espantildea existieron tambieacuten pareacutentesis en los que incluso miembros de la iglesia y mujeres mdashhumanos al fin y al cabomdash pudieron disfrutar de algunos momentos de regocijo y alegriacutea Con-tinuando con la cita anterior el mismo autor se queja del laquoexcesoraquo de libertad en los frailes que se suponiacutea que teniacutean que profesar una extremada pobreza y no digamos castidad En primer lugar se describen pormenorizadamente la abundancia en el tipo y cantidad de comida de toda clase dulces y vino que se consumieron con largueza y generosidad durante aquellas fiestas Pero lo que maacutes indigna al autor (o autores) fue que llegasen a entrar mujeres en el convento

y aunque todo esto es malo delante de Dios y delante de los hom-bres lo que maacutes mal parecioacute y de que todo el mundo tuvo que mur-murar fueacute la demasiada libertad rotura y disolucioacuten que hubo en en-trar y estar muy de propoacutesito mujeres no soacutelo la Vireyna y las suyas sino otras muchas dentro del dicho convento y andar por las celdas como si fuese cosa profana y como si no hubiera breve apostoacutelico que soacute graves penas y censuras prohibe estas entradas y como si a los frai-les no los comprendiera el dicho breve por admitirlas y no estuviera asiacute declarado y mandado por nuestros estatutos generales de Toledo (Romero 4-5)

La preocupacioacuten por las laquotentaciones de la carneraquo fuera del matrimonio siempre es-tuvo en la mente de los religiosos espantildeoles asiacute como de otras nacionalidades y reli-

160 JUAN FRANCISCO MAURA

giones que intentaban vanamente erradicar algo tan intriacutenseco al ser humano como a cualquier otra especie animal Esta preocupacioacuten se acentuoacute mucho maacutes en el Nuevo Mundo donde muchas sociedades tribales no veiacutean a la mujer como parte integrante de su propiedad privada La razoacuten es obviamente socioloacutegica y ha existido desde el principio de los tiempos en las civilizaciones maacutes primitivas laquoNo desearaacutes a la mujer del proacutejimoraquo El quebrantar este precepto equivaldriacutea a desestabilizar desde su base a la sociedad judeo-cristiana fundamentada en la familia Las penas aplicadas en estas transgresiones seraacuten lo suficientemente severas como para marginar socialmente mdashen el mejor de los casosmdash a aquellos que las pongan en praacutectica Siendo la mujer la encar-gada por la naturaleza de trasmitir la descendencia de la especie su libertad sexual se veraacute limitada por el peligro de quedar embarazada cada vez que ignore tal elemental precepto140

Primeras escritoras del Nuevo Mundo

Contra cuerdos y contra locos estaacute obligado cualquier caballero andante a volver por la honra de las mujeres cualesquiera que sean Cuanto maacutes por las reinas de tan alta guisa y pro como fue la reina Madaacutesima a quien yo tengo particular aficioacuten por sus buenas partes porque fuera de haber sido fermosa ademaacutes fue muy prudente y muy sufrida en sus calamidades que las tuvo muchas (Cervantes Don Quijote)

Fueron varias las escritoras que durante los siglos XVI y XVII tuvieron una relacioacuten di-recta o indirecta con el Nuevo Mundo Muchas de ellas eligieron la vida monaacutestica mdashen algunos casos como refugio huyendo de sus maridosmdash uacutenica salida en una estructura social en donde no eran muchas las opciones especialmente en una eacutepoca donde el fac-tor religioso pesaba casi tanto como el econoacutemico pero sobre todo para dedicarse a una vida espiritual difiacutecilmente alcanzable en otras circunstancias Mariloacute Vigil apunta que las monjas que lo eran por su propia voluntad ademaacutes de tener inquietudes religiosas tambieacuten las teniacutean intelectuales como es el caso de la escritora miacutestica espantildeola Santa Teresa de Jesuacutes (1515-1582) que ademaacutes de tener una de las vidas maacutes interesantes que se conozcan supo sacar tiempo para escribir las maacutes bellas manifestaciones de la poesiacutea liacuterica y sobre todo de la prosa castellana (Vigil 237-38) Cada una de estas mujeres de-dicadas a la vida literaria y espiritual de su tiempo se merece muchiacutesimo maacutes espacio del que se les pueda ofrecer en estas pocas liacuteneas No obstante con estas pasajeras men-

140 Aunque afortunadamente las cosas han cambiado para la mujer no se debe dejar de mencionar la can-tidad de abusos sexuales de la que es viacutectima en la sociedad moderna

161ESPANtildeOLAS DE ULTRAMAR EN LA HISTORIA Y EN LA LITERATURA

ciones se espera al menos incluirlas y poder despertar el suficiente intereacutes para que sus vidas y sus obras no sigan sumergidas en las simas del olvido Para que estas mujeres de la iglesia pudiesen satisfacer su curiosidad cognoscitiva era necesario romper todas aquellas barreras que supusiesen un estorbo o una restriccioacuten a la hora de investigar consultar o hablar con cualquier persona religiosa de cualquier orden o secular ya fue-se obispo o cleacuterigo Las posiciones intelectuales entre las diferentes oacuterdenes religiosas fueron muy dispares como bien es sabido No eran iguales los planteamientos teoloacute-gicos de los dominicos que los de los franciscanos o los de los carmelitas que los de los agustinos o jesuitas Era necesario por lo tanto tener acceso a estas fuentes de informa-cioacuten para poder constrastar las diferencias y hacer valoraciones propias (Vigil 237-38) El escritor espantildeol Caro Baroja destaca el caraacutecter enciclopeacutedico del catolicismo donde se han integrado corrientes y posturas muy dispares que a traveacutes del diaacutelogo daban cierto espacio al creyente con maacutes curiosidad intelectual para que este pudiese compa-rar y valorar las diferentes opciones que se le ofreciacutean (Vigil 237-38)

Varias de estas mujeres intelectuales fueron hijas de conquistadores que aunque na-cidas en suelo americano seguiacutean expresaacutendose en la lengua de sus padres con no me-nos fuerza que sus contemporaacuteneas peninsulares Es cierto que existieron numerosas escritoras en el Nuevo Mundo durante el siglo XVIII algunas dedicadas incluso al estudio de las matemaacuteticas como la mexicana Dontildea Francisca Gonzaga y Castillo Pero para limitar el presente trabajo a los siglos XVI y XVII uacutenicamente se incluiraacuten ejemplos de estos dos siglos

La peruana Josefa de Alarcoacuten publicoacute en 1648 unas liras dedicadas a las Exequias del Priacutencipe Baltasar Carlos

Cifro en capilla breveEl tribunal de la Magestad maacutes graveEn fe de lo que debeA Carlos que en dos mundos no cabe141

El caso de Sor Jeroacutenima de la Asuncioacuten es muy interesante una mujer que tuvo la oportunidad de viajar a Meacutexico y posteriormente a las Filipinas para cumplir con las mi-siones que le habiacutean sido encomendadas por su orden Nacida en Toledo en 1555 en el seno de una noble y acaudalada familia estuvo destinada a recorrer el mundo ofrecien-do sus servicios a todos los necesitados distinguieacutendose por su ardiente caridad laquovien-do que los galeotes eran tratados con dureza excesiva sobre todo cuando los llevaban de un pueblo a otro procuroacute aliviar las penas de aquellos desgraciados y lo consiguioacute en parteraquo (Serrano y Sanz 268 65) Hija del licenciado e ilustre jurista Pedro Garciacutea Yaacute-ntildeez y de dontildea Catalina de la Fuente ingresoacute contra su voluntad en el monasterio de las Clarisas de Santa Isabel de los Reyes (Toledo) el 5 de agosto de 1570 (Trevintildeo 46) hay que decir que eacutesta no seraacute la uacutenica voluntad contra la que tuvo que luchar

Sor Jeroacutenima se embarcoacute para Meacutexico y de alliacute partioacute hacia Manila junto con siete compantildeeras en el famoso laquoGaleoacuten de Manilaraquo que saliacutea anualmente del puerto mexi-cano de Acapulco Su viaje a las Filipinas duroacute un antildeo y tres meses desde su salida de Espantildea tiempo en el que demostroacute un gran valor y determinacioacuten por el soacutelo hecho de

141 Manuel Serrano y Sanz Apuntes para una biblioteca de escritoras espantildeolas desde el antildeo 1401 al 1833 vols 268 269 270 271 Biblioteca de Autores Espantildeoles (Madrid Atlas 1975) 268 19

162 JUAN FRANCISCO MAURA

embarcarse en tan precarias naves Fue la primera misionera de Oceaniacutea muriendo en Manila en 1621 Alliacute fundoacute el monasterio de Santa Clara que perviviriacutea hasta ser bom-bardeado en la Segunda Guerra Mundial (Trevintildeo 47) Escribioacute su Vida donde trata de la fundacioacuten del convento y de todas las tribulaciones mdashllegoacute a ser excomulgadamdash y satisfacciones que una vida dedicada a una causa justa proporciona Tambieacuten escribioacute una obra de caraacutecter filosoacutefico-teoloacutegico titulada Carta de marear en el mar del mundo nombre alegoacuterico que da cuenta de la enorme distancia recorrida a traveacutes del laquomar del espiacuterituraquo por sor Jeroacutenima He aquiacute algunos de sus versos de caraacutecter religioso

Vuestra soy para vos naciacuteiquestQueacute mandaacuteis hacer de miacute Inaccesible grandezaEterna Sabiduriacuteay bondad del alma miacuteaDios un ser poder y Altezamirad la suma pobrezade eacutesta que se ofrece aquiacuteiquestQueacute mandaacuteis hacer de miacute (Serrano y Sanz 268 66)

Ya en Meacutexico tenemos otro ejemplo de una mujer dedicada por completo a Dios y al estudio y composicioacuten de obras de caraacutecter teoloacutegico Dontildea Ana Mariacutea del Costa-do de Cristo nacida en la ciudad de Tlaxcala hacia el antildeo 1650 Tomoacute la orden de San Francisco para consagrarse a las labores de su orden y a la escritura Se dice que con los escritos de Dontildea Ana Mariacutea se podriacutean formar veinte tomos (Serrano y Sanz 268 282) Estas son algunas de sus obras Vida y muerte de Jesucristo Nuestro Sentildeor Vida del Seraacutefico Padre San Francisco de Asiacutes Vida de la iacutenclita Virgen Santa Clara Vida del sutiliacutesimo doctor Juan Duns Escoto

Pero no todas las monjas tuvieron vidas tan dedicadas al estudio y la oracioacuten Loacutegica-mente entre un nuacutemero tan grande de mujeres existioacute de todo y seriacutea un error pensar que todos los conventos femeninos estaban integrados por laquocaacutendidas palomasraquo Una monja en el siglo XVI y XVII teniacutea mucha maacutes fuerza que una mujer ordinaria ya que actuaban en grupo y la entrada a los recintos donde viviacutean estaba permitida solo a mu-jeres Esta situacioacuten las haciacutea mucho maacutes fuertes a todos los niveles que una mujer sola protegida uacutenicamente por su familia laquoLas monjas durante los siglos XVI y XVII lucharon por eludir la clausura y por zafarse del control que los frailes de las secciones masculi-nas de sus congregaciones ejerciacutean sobre ellasraquo (Vigil 230) Soacutelo un antildeo maacutes tarde que dontildea Ana Mariacutea del Costado de Cristo en 1651 y a 12 leguas de Meacutexico nacioacute la sin par Sor Juana Ineacutes de la Cruz hija de don Pedro Manuel de Asbaje natural de Vergara (Vizcaya) y de Dontildea Isabel Ramiacuterez de Santillana hija de espantildeoles (Serrano y Sanz 268 289) Por ser sin lugar a dudas la poeta maacutes importante de su tiempo y probable-mente la maacutes conocida del mundo hispano no profundizaremos en ella Su obra es un canto a la inteligencia y el exponente maacutes destacado de la literatura barroca americana tanto en prosa como en verso Destacareacute simplemente que Sor Juana Ineacutes pese a vivir en un sociedad donde no eran excesivas las libertades concedidas a las mujeres tuvo el caraacutecter y la determinacioacuten de dejarnos las maacutes bellas poesiacuteas amorosas que si bien estuvieron enmarcadas en un ambiente religioso como era de esperar por su condicioacuten

163ESPANtildeOLAS DE ULTRAMAR EN LA HISTORIA Y EN LA LITERATURA

pudieron transcender como unas de las maacutes bellas manifestaciones literarias que hoy en diacutea se conservan Fue su agudeza mental sensibilidad y cultura tal que no fueron suficientes los soacutelidos muros del convento para contener el genio de tan extraordinaria mujer Recordemos sus conocidiacutesimos versos en defensa de las mujeres

Hombres necios que acusaacuteisa la mujer sin razoacutensin ver que sois la ocasioacutende lo mismo que culpaacuteis142

Las metaacuteforas y la delicadeza que emplea en rebatir a su obispo en su laquoRespuesta a sor Filotea de la Cruzraquo no son solamente el epiacutetome del feminismo de su tiempo sino una de las maacutes brillantes manifestaciones del barroco hispano Poesiacutea teatro ensayo y un conocimiento extraordinario de las ciencias claacutesicas de su tiempo hacen de esta mujer un ejemplo extraordinario de las letras universales Ya son cientos los artiacuteculos y libros que se han escrito sobre Sor Juana y no dejan de aparecer tesis doctorales sobre los maacutes diversos temas conectados con la citada autora143 Como nos dice Stephanie Merrim en su documentada obra Early Modern Womenrsquos Writing and Sor Juana Ineacutes de la Cruz

She wrote and published on secular themes as atypical for a nun as human love Her remarkably extensive writings essayed and reenacted most of the (male) poetic dramatic theological and even philosophi-cal discourses of her times in the metropolis making her works a com-pendium of baroque culture in its diversity and syncretism Sor Juana self-creation as a learned women effectively toppled many of the walls in which she was materially enclosed and positioned her within the dynamic world of early modern European culture (xii)

No se debe dejar de mencionar a otras escritoras novohispanas de la eacutepoca que aun-que no fueron tan proliacuteficas y relevantes como Juana Ineacutes de la Cruz dejaron testimo-nio de algunos acontecimientos que tienen intereacutes socioloacutegico o testimonial Este es el caso de Dontildea Mariacutea Estrada Medinilla de igual nombre y apellido que la mujer que acompantildeoacute a las tropas de Corteacutes en su primera entrada a Meacutexico Natural de Meacutexico publicoacute toda su obra a mediados del siglo XVII concentraacutendose principalmente en la lle-gada del Marqueacutes de Villena virrey y capitaacuten general de la Nueva Espantildea a la ciudad de Meacutexico en el antildeo 1640 Escrita en octavas reales la obra trata de las fiestas de toros y cantildeas con que se obsequioacute al citado virrey Fue impresa en Meacutexico en 1641 (Serrano y Sanz 269 402)

Mucho maacutes importante para el presente libro es Dontildea Isabel de Guevara que escribioacute en 1556 la carta en que se expone la ayuda que ofrecieron las mujeres en el descubri-miento y conquista del Riacuteo de la Plata No cabe la menor duda de que esta carta es uno

142 Para una mejor comprensioacuten del caraacutecter de esta excepcional mujer veacutease entre los numeros trabajos publicados Fredo Arias de la Canal Intento de psicoanaacutelisis de Juana Ineacutes y otros ensayos sorjuanistas (Meacutexico Frente de Afirmacioacuten Hispanista 1972) 47

143 Veacuteanse entre otros trabajos Octavio Paz Sor Juana Ineacutes de la Cruz o las trampas de la fe Georgina Sabat de Rivers En busca de Sor Juana Margo Glantz Sor Juana la comparacioacuten y la hipeacuterbole Gerard C Flynn Sor Juana Ineacutes de la Cruz Stephanie Merrim Feminist perspectives on Sor Juana Ineacutes de la Cruz Pamela Kirk Sor Juana Ineacutes de la Cruz religion art and feminism

164 JUAN FRANCISCO MAURA

de los documentos maacutes importantes con que contamos en relacioacuten a la aportacioacuten fe-menina en el proceso de la conquista de Ameacuterica Su importancia viene dada por varios factores Primero es uno de los primeros testimonios mdashsi no el primeromdash en donde se expone abiertamente la indispensable colaboracioacuten de las mujeres en el descubrimien-to y conquista de tierras en el Nuevo Mundo laquoQue si no fuera por ellas todos fueran acabadosraquo En segundo lugar la informacioacuten vertida en estas liacuteneas presenta en parte la manera de pensar de una mujer espantildeola en tales circunstancias Extraordinario tes-timonio de primera mano que nos da una idea de lo que significoacute en muchos casos el valor y entrega constantes de muchas de estas mujeres que auacuten a riesgo de perder sus vidas no dudaron en luchar al lado de los hombres por una causa que consideraban laquocomuacutenraquo

La relevancia histoacuterica de dicha carta hace que merezca ser transcrita en su totali-dad

Carta de dontildea Isabel de Guevara a la princesa gobernadora dontildea Juana exponiendo los trabajos hechos en el descubrimiento y conquista del Riacuteo de la Plata por las mujeres para ayudar a los hombres y pidiendo repartimiento

para su marido Asuncioacuten 2 de julio de 1556

Muy alta y muy poderosa sentildeora

A esta provincia del Riacuteo de la Plata con el primer gobernador de ella don Pedro de Mendoza hemos venido ciertas mujeres entre las cuales ha querido mi ventura que fuese yo la una y como la armada llegase al puerto de Buenos Aires con mil quinientos hombres y les faltase el bastimento fue tamantildea el hambre que a cabo de tres meses murie-ran los mil esta hambre fue tamantildea que ni la de Jerusalem se le puede igualar ni con otra ninguna se puede comparar Vinieron los hombres en tanta flaqueza que todos los trabajos cargaban de las pobres mu-jeres asiacute en lavarles las ropas como en curarles hacerles de comer lo poco que teniacutean limpiarlos hacer centinela rondar los fuegos armar las ballestas cuando algunas veces los indios les veniacutean a dar guerra hasta cometer a poner fuego en los versos y a levantar los soldados los que estaban para ello dar arma por el campo a voces sargentean-do y poniendo en orden los soldados porque en este tiempo como las mujeres nos sustentamos con poca comida no habiacuteamos caiacutedo en tanta flaqueza como los hombres Bien creeraacute V A que fue tanta la so-licitud que tuvieron que si no fuera por ellas todos fueran acabados y si no fuera por la honra de los hombres muchas maacutes cosas escribiera con verdad y los diera a ellos por testigos Esta relacioacuten bien creo que la escribiraacuten a V A maacutes largamente y por eso cesareacute Pasada esta tan peligrosa turbunada determinaron subir el riacuteo arriba asiacute flacos como estaban y en entrada de invierno en dos bergantines los pocos que quedaron vivos y las fatigadas mujeres los curaban y los miraban y les guisaban la comida trayendo la lentildea a cuestas fuera del naviacuteo y animaacutendolos con palabras varoniles que no se dejasen morir que presto dariacutean en tierra de comida metieacutendolos a cuestas en los

165ESPANtildeOLAS DE ULTRAMAR EN LA HISTORIA Y EN LA LITERATURA

bergantines con tanto amor como si fueran sus propios hijos Y como llegamos a una generacioacuten de indios que se llaman tinbues sentildeores de mucho pescado de nuevo los serviacuteamos en buscarles diversos modos de guisados porque no les diese en rostro el pescado a causa de que lo comiacutean sin pan y estaban muy flacos Despueacutes determinaron subir el Paranaacute arriba en demanda de bastimento en el cual viaje pasaron tanto trabajo las desdichadas mujeres milagrosamente quiso Dios que viviesen por ver que en ellas estaba la vida de ellos porque todos los servicios del naviacuteo los tomaban ellas tan a pechos que se teniacutea por afrentada la que menos haciacutea que otra sirviendo de marear la vela y gobernar el naviacuteo y sondar de proa y tomar el remo al soldado que no podiacutea bogar y escotar144 el naviacuteo y poniendo por delante a los soldados que no se desanimasen que para los hombres eran los trabajos verdad es que a estas cosas ellas no eran apremiadas ni las haciacutean de obliga-cioacuten ni las obligaba si solamente la caridad Asiacute llegaron a esta ciudad de la Asuncioacuten que aunque ahora estaacute muy feacutertil de bastimentos en-tonces estaba de ellos muy necesitada que fue necesario que las muje-res volviesen de nuevo a sus trabajos haciendo rosas con sus propias manos rosando y carpiendo y sembrando y recogiendo el bastimento sin ayuda de nadie hasta tanto que los soldados guarecieron de sus fla-quezas y comenzaron a sentildeorear la tierra y adquirir indios e indias de su servicio hasta ponerse en el estado en que ahora estaacute la tierra He querido escribir y traer a la memoria de V A para hacerle saber la ingratitud que conmigo se ha usado en esta tierra porque al presente se repartioacute por la mayor parte de los que hay en ella asiacute de los anti-guos como de los modernos sin que de miacute y de mis trabajos se tuviese ninguna memoria y me dejaron de fuera sin me dar indio ni ninguacuten geacutenero de servicio Mucho me quisiera hallar libre para me ir a presen-tar delante de VA con los servicios que a SM he hecho y los agravios que ahora se me hacen mas no estaacute en mi mano porque estoy casada con un caballero de Sevilla que se llama Pedro de Esquivel que por servir a SM ha sido causa que mis trabajos quedasen tan olvidados y se me renovasen de nuevo porque tres veces le saqueacute el cuchillo de la garganta como allaacute VA sabraacute A que suplico mande me sea dado mi repartimiento perpetuo y en gratificacioacuten de mis servicios [en el origi-nal del AHN Diversos doc 141 dice ademaacutes mande que sea proveydo mi marido de alguacuten cargo conforme a la calidad de su persona pues el de su parte por sus servicios lo merece] lo merece Nuestro sentildeor acre-ciente su Real vida y estado por muy largos antildeos De esta ciudad de la Asuncioacuten y de julio 2 1556 antildeosServidora de V A que sus Reales manos besa

Dontildea Isabel Guevara

144 Sacar agua de un riacuteo acequia o presa

166 JUAN FRANCISCO MAURA

Sobremdash A la muy alta y muy poderosa sentildeora Princesa dontildea Joana Gobernadora de los reinos de Espantildea etc ndash En su Consejo de Indias (Isabel de Guevara 619-21)

Iroacutenicamente la carta teniacutea que llegar a manos de la desdichada heredera del trono de Castilla e hija de los Reyes Catoacutelicos Juana laquola Locaraquo que habiacutea muerto el antildeo an-terior Son profeacuteticas las palabras de esta mujer no soacutelo porque sus hechos personales quedasen en el olvido sino porque incluso se ha borrado la historia de las mujeres en el Nuevo Mundo negando su presencia Por lo menos Isabel Guevara tuvo acceso a una pluma iquestCuaacutentas seriacutean las que ni siquiera sabriacutean escribir

Otra contemporaacutenea fue dontildea Leonor de Iciz que vivioacute durante la segunda mitad del siglo XVI Interesa sobre todo por los sonetos que escribioacute en elogio de Ercilla soldado que participoacute en la conquista de Chile y que se inmortalizoacute con su obra La Araucana (Serrano y Sanz 269 534) Lo mismo hizo Dontildea Bernarda Lintildeaacuten en 1610 autora de otro soneto en memoria del capitaacuten Gaspar Peacuterez de Villagraacute que participoacute en la conquista de Nuevo Meacutexico (Serrano y Sanz 270 14) Los escritos de estas mujeres tratan de de dos de las eacutepicas maacutes dramaacuteticas de la conquista

En el Peruacute y en pleno siglo XVII aparece otra fundadora de conventos Sor Bernardina de Jesuacutes que ademaacutes fue comparada con Santa Teresa por la semejanza de sus laquocartasraquo con las de la santa de Avila Fue fundadora del convento de Tacunga en Quito maacutes tarde destruiacutedo por un terremoto Dice Serrano y Sanz con respecto a su biografiacutea un tanto legendaria que fue carmelita descalza de Lima y hermana de Dontildea Mariacutea Benavides y Esquivel abuela de D Pedro de Peralta Barnuevo (Serrano y Sanz 269 553) Dicen que esta santa se alimentoacute durante treinta antildeos con laquochochos y caacutescaras de naranja hecho tan raro como increiacuteble Cuando fallecioacute reparaban las monjas en ponerle una vara de azucenas porque habiacutea sido casada y aquellas flores aparecieron milagrosamente sobre el cadaacuteverraquo (Serrano y Sanz 269 553)

Otra limentildea del primer cuarto del siglo XVII con reputacioacuten de santa fue Dontildea Luisa Melgarejo En este caso no se trata de una religiosa de oficio sino de la mujer del doctor Juan de Soto La uacutenica diferencia es que dontildea Luisa al parecer teniacutea laquovisiones y reve-lacionesraquo lo que debioacute poner nervioso a maacutes de un miembro del tribunal del laquoSanto Oficioraquo que consideraron sus escritos laquoculpadosraquo De su papel de laquosantaraquo pasa por lo tanto al de laquoposesaraquo o laquoendemoniadaraquo El inquisidor de Lima Gaitaacuten escribioacute un infor-me donde a traveacutes de la opinioacuten puacuteblica y de otras averiguaciones se deciacutea que dontildea Luisa Melgarejo laquomujer santaraquo sabiacutea cuando las almas de los difuntos saliacutean del Purga-torio El diacutea 14 de noviembre de 1623 se decidioacute tomar posesioacuten de todos los cuadernos en los que habiacutea escrito las experiencias de todos sus laquoarrobos suspensiones extasis y revelacionesraquo Estos cuadernos una vez recogidos presentaron toda una serie de al-teraciones borrones adiciones enmiendas incluso diferente letra por lo que despueacutes de haber sido examinados resultaron culpables145 Excelente imaginacioacuten debioacute tener dontildea Luisa Melgarejo la suficiente al parecer para convencer a algunos miembros de la iglesia de que en sus escritos laquohabiacutea algoraquo que mereciacutea la pena Estas cosas ocurriacutean en Lima uno de los centros culturales maacutes importantes de la vida social y poliacutetica en la Ameacuterica espantildeola Lima a comienzos del siglo XVII seguacuten el empadronamiento llevado

145 Serrano y Sanz 270 47 Veacutease J T Medina Historia del tribunal del Santo Oficio de la Inquisicioacuten de Lima (1569-1820) (Santiago Imprenta Gutemberg 1887) Tomo II 34-41

167ESPANtildeOLAS DE ULTRAMAR EN LA HISTORIA Y EN LA LITERATURA

a cabo en 1614 por el marqueacutes de Montesclaros era una ciudad de 25000 habitantes de los que 11000 eran espantildeoles El nuacutemero de religiosos y religiosas llegaba a 1720 (Pittaluga 77)

Se sabe que en la Isla de Santo Domingo durante el siglo XVI nacioacute o al menos resi-dioacute una poeta de ceacutelebre apellido en los aconteceres del Nuevo Mundo Dontildea Elvira de Mendoza de la que se conserva un manuscrito en la Real Academia de la Historia laquoCantares miacuteos que estaacuteis rebeladosraquo Eugenio de Salazar hace un elogio de ella como poeta en un Soneto a la ilustre Poeta y Sentildeora Dontildea Elvira de Mendoza moradora en la ciudad de Santo Domingo (Serrano y Sanz 270 53)

Nacida en Burgos sobre el antildeo 1590 dontildea Luisa de Padilla merece un lugar aparte dentro del grupo de mujeres escritoras de su eacutepoca Por su estilo faacutecil y castizo su no-vedad de pensamientos y su rica erudicioacuten recibioacute el siguiente comentario de Manuel Serrano y Sanz laquoPocas figuras hay en nuestra historia literaria femenil que puedan compararse a esta eminente prosista acaso la maacutes notable de cuantas florecieron en Es-pantildea durante el siglo XVIIraquo (Serrano y Sanz 270 95-96) Este comentario y comparacioacuten deberiacutea ampliarse para que tambieacuten incluyese a laquola historia literaria varonilraquo

Dontildea Luisa fue defensora de la labor que la Inquisicioacuten estaba realizando en la laquolim-piezaraquo de mujeres laquosoldados del demonioraquo que existieron en algunas provincias espa-ntildeolas en aquel tiempo Muchas de las mujeres que combinaban la magia con los po-deres curativos fueron condenadas no solamente por hombres de la Inquisicioacuten sino tambieacuten por mujeres de todas las clases sociales como es el caso de Luisa de Padilla condesa de Aranda En su obra Elogios de la verdad e invectiva contra la mentira preveniacutea contra aquellos que practicaban artes en contra de la religioacuten cristiana La magiacutea negra seguacuten Padilla era la causante de que muriesen casi tantas personas como otras causas naturales habieacutendose descubierto hasta seis mil brujas en Vizcaya y Guipuzcua con-fesando una mujer de un pueblo pequentildeo haber matado con su laquomagiaraquo a ochocientas personas (Perry 31) Eran estos laquomales de ojoraquo y maldiciones seguacuten la autora las causas de que se secasen los pechos de las madres lactantes que se separasen las parejas casa-das y que abortasen las embarazadas (Perry 31)

Si se tiene en cuenta que dontildea Luisa estuvo emparentada con la maacutes rancia aristocra-cia de su tiempo o lo que es lo mismo con algunos de aquellos que en cierta manera dirigiacutean los destinos de Espantildea en aquella eacutepoca (Duques de Lerma Duque de Uceda Marqueacutes de Cueacutellar Conde de Santa Gadea Marqueacutes de Belmonte por citar algunos) se comprenderaacute mejor su identificacioacuten con una institucioacuten que en teoriacutea velaba por la salvaguarda de los valores laquoeternosraquo de una Espantildea destinada a ser la campeona del ca-tolicismo durante los siglos XVI y XVII El padre de dontildea Luisa fue don Martiacuten de Padilla y Manrique extraordinario militar que proboacute su valor contra enemigos moriscos ingle-ses holandeses piratas berberiscos y el renegado genoveacutes Muley Faxad Fue veterano de la batalla de Lepanto donde apresoacute a cuatro galeras y acompantildeoacute con su escuadra a la reina Dontildea Margarita de Austria cuando vino de Geacutenova en 1598 laquoHabiacutea obtenido a 24 de julio de 1587 el tiacutetulo de Conde de Santa Gadea y en 1596 el de Capitaacuten General de la Armada del mar Oceacuteanoraquo (Serrano y Sanz 27095-96)

Por otra parte tambieacuten se sabe que dontildea Luisa participoacute directamente y desde tem-prana edad en la praacutectica de algunas actividades intelectuales como la historia y la arqueologiacutea a la vez que dedicaba su tiempo a virtudes cristianas como la caridad y el socorro de los necesitados (Serrano y Sanz 270 97) Resulta mucho maacutes faacutecil compren-

168 JUAN FRANCISCO MAURA

der la postura ideoloacutegica de esta gran mujer si tienen en cuenta ademaacutes de los factores antes mencionados otros tantos de caraacutecter biograacutefico concernientes a su educacioacuten y matrimonio

Otra escritora fue la mexicana dontildea Mariacutea Casilda Pozo natural de Temestla (Meacutexi-co) Nacida en el mes de abril de 1682 dejoacute escrita su biografiacutea en 16 cuadernos el ma-nuscrito original se encuentra en la biblioteca del colegio de San Gregorio de Meacutexico Fue su confesor el jesuiacuteta Domingo Quiroga que fue quieacuten la incitoacute a escribir su obra (Serrano y Sanz 270 137) Sor Juana de San Antonio aparece a principios del siglo XVII formando parte de un grupo de religiosas espantildeolas que fueron a Manila por la ruta de Meacutexico Ademaacutes de distinguirse por sus cualidades personales su obra interesa por ofrecer informacioacuten testimonial y costumbrista acerca de la forma de vestir de chinos y japoneses (Serrano y Sanz 270 225)

Otra monja esta vez ecuatoriana fue Gertrudis de San Ildefonso Nacida en 1652 profesoacute su vocacioacuten en el convento de Santa Cruz de Quito dejando escrita su vida por mandato de su confesor el padre Martiacuten de la Cruz el cual hizo una biografiacutea laquoen tres gruesos voluacutemenesraquo Gertrudis de San Ildefonso murioacute en 1709 (Serrano y Sanz 270 300) en olor de santidad

Sor Mariacutea Ana Agueda de San Ignacio nacioacute el 3 de marzo de 1695 en la dioacutecesis de la puebla de los Angeles en un rancho del lugar de Santiago Tecaliacute (Serrano y Sanz 270300) Esta monja mexicana escribioacute varias obras durante su vida conventual a lo largo de la cual desempentildeoacute el cargo de priora por muchos antildeos Entre sus obras todas de caraacutecter piacuteo y de laquoamor divinoraquo escribioacute un curioso y laquocopiosoraquo tratado de la Leche virginal de la Soberana Madre de Dios El padre Fr Juan de Villa Saacutenchez hace el siguiente comentario al respecto laquoen que hablando primero en sentido natural de los beneficios que debemos a Nuestra Sentildeora pasa a tratar en sentido miacutestico y alegoacuterico enten-diendo en la leche la doctrinaraquo (Serrano y Sanz 270301) Mexicana fue tambieacuten Sor Petronila de San Joseacute que ejercioacute como abadesa del Real monasterio de Jesuacutes Mariacutea de la ciudad de Meacutexico Escribioacute Vidas de varias religiosas ejemplares obra que tiene su im-portancia ya que al parecer laquoDe esta obra se sirvioacute D Carlos de Siguumlenza y Goacutengora para escribir su Parayso Occidental (Meacutexico 1684) seguacuten eacutel mismo declara en el proacutelogo diciendo lsquoa quien si hay algo bueno en esta historia se le debe todorsquoraquo (Serrano y Sanz 270 354) Menos conocida fue su compatriota Sor Luisa de Santa Catalina natural de Xacona laquopueblo situado en las inmediaciones de Zamora (Meacutexico)raquo siendo bautizada en 1682 Escribioacute Cartas espirituales a su confesor el P Juan Loacutepez de Aguado (Serrano y Sanz 270 361-62)146

Todos estos escritos la mayoriacutea de ellos ignorados por el gran puacuteblico tienen la im-portancia de darnos una perspectiva diferente En otras palabras ensentildearnos la maacutes refinada sensibilidad de muchas mujeres que permanecieron y en su mayoriacutea siguen permaneciendo a laquooscurasraquo de una eacutepoca tan rica de la literatura espantildeola como fue el Siglo de Oro Este siglo fue tambieacuten en su dimensioacuten literaria y artiacutestica patrimonio de la mujer

146 Para profundizar en muchas de estas escritoras hispano-americanas la consulta de la Biblioteca Hispano-Americana de Beristain de Souza resulta de capital importancia

169ESPANtildeOLAS DE ULTRAMAR EN LA HISTORIA Y EN LA LITERATURA

Sor Nada ardores divinos de una monja adolescente escritos ineacutedi-tos de una recieacuten profesa del siglo XVI147

iexclQueacute encantadores son tus amores hermana miacutea espo-sa iexclQueacute deliciosos son tus amores maacutes que el vino Y el aroma de tus perfumes es mejor que el de los baacutelsamos Miel virgen destilan tus labios esposa miel y leche hay en tu lengua y el perfume de tus vestidos es como aroma de incienso (Cantar de los Cantares 4 10-11)

Sor Nada llamada asiacute por humildad seguacuten dice el Indice de manuscritos de la Biblio-teca Nacional de Madrid es uno de los ejemplos maacutes desconocidos e interesantes que tenemos de la poesiacutea y prosa amoroso-religiosa del siglo XVII Hasta la fecha nunca se habiacutea publicado su obra e incluso hasta el antildeo 1995 para mi sorpresa no habiacutea copias microfilmadas de sus manuscritos en la Biblioteca Nacional Serrano y Sanz en su libro Apuntes para una Biblioteca de Escritoras Espantildeolas hace una escueta y pasajera mencioacuten de esta mujer y de su obra (68-69) siendo eso todo lo que hasta ahora se sabiacutea de ella Sus escritos consisten en los siguientes manuscritos

1 laquoEn queacute consiste un verdadero amor de Diosraquo 9 hojas uacutetiles en 4ordm letra del siglo XVII Biblioteca Nacional de Espantildea Manuscrito 1295926

2 laquoPintura del Propio Amorraquo laquoPintura del propio Amorraquo 10 hojas uacutetiles en 4ordm letra del siglo XVII Biblioteca Nacional de Espantildea Manuscrito 1295927

3 laquoEsplicacioacuten sobre en queacute consiste la paz del Almaraquo laquoQuartillas aacute un Alma que padece soledad interiorraquo 7 hojas uacutetiles en 4ordm letra del siglo XVII Biblioteca Nacio-nal de Espantildea Manuscrito 1295828

En cuanto a su persona soacutelo se nos dice que laquose encubrioacute con este seudoacutenimo laquoSor Nadaraquo Esta monja desconocida de origen hispanoamericano posee toda la frescura e ingenuidad de una joven apasionada metida por vocacioacuten u obligacioacuten a ejercer la profesioacuten maacutes comuacuten para mujeres de cierta clase social de su tiempo En sus liacuteneas podemos encontrar un misticismo simple incluso en algunos momentos infantil pero a su vez lleno de una fuerza y sensualidad interior poco comuacuten en escritos de este geacute-nero que desborda los liacutemites del laquoamor divinoraquo a traveacutes de los diaacutelogos entre el Alma y el Esposo Sor Nada consigue proyectar su amor a Dios maacutes allaacute de una experiencia romaacutentica Su experiencia es sincera y genuinamente miacutestica trascendiendo la imita-cioacuten o la propia creacioacuten poeacutetica ficcionalizada (Hatzfeld 30) Algunos pasajes son de un

147 Veacutease mi artiacuteculo Sor Nada ardores divinos de una monja adolescente escritos ineacuteditos de una monja profesa del siglo XVIIraquo Espeacuteculo Revista de estudios literarios 26 (2004) 1-10 Universidad Complutense de Madrid http wwwucmesinfoespeculonumero26sornadahtml

170 JUAN FRANCISCO MAURA

alto contenido eroacutetico con sustantivos y metaacuteforas que recuerdan la maacutes iacutentima unioacuten amorosa en unos casos y el tierno amor maternal en otros

[T]e miro Jesus mio desnudo a las inclemencias del tiempo y ardien-do en puro fuego de Amor por la salud de las Almas y me ensentildeas a que te ame con todo mi corason y puresa de espiritu No atendiendo ni buscando umanos intereses ni a solisitar consuelos ni regalos espi-rituales que suelen empantildear la puresa del noble corason No mi Jesus amable pues antes me ensentildeaste tu puro Amor que desnudo sean [sic] de encaminar mis passos desde el pesebre asta la cuna en donde te miro tan desnudo como el pesebre y todo Sentildeor por mi Amor (Mss 12959 26 hoja 1 v)

El manuscrito (12959 27) de la mencionada serie de tres contiene algunas correccio-nes quizaacute hechas por el confesor o quizaacute por ella misma cuando se dirige con excesiva familiaridad y arrebatado fervor a su Amado148 He escogido el manuscrito (12959 Caja 28) en primer lugar por ser el ejemplo maacutes representativo de su poesiacutea y prosa En este manuscrito encontramos de forma maacutes directa que alegoacuterica toda la frescura de un diaacutelogo entre Jesuacutes y el alma que raya como diriacutea Cervantes laquoa la llana y sin rodeosraquo (667 lib 2 cap 38) con el doloroso y a veces desesperado deseo de la entrega y la unioacuten final con el Amado La ortografiacutea no ha sido corregida respetaacutendose el texto ori-ginal149 Veamos el siguiente fragmento

Mira que te amo con Amor de padre y con Amor de esposo el mas fino y puro enamorado que no tan solo me presio de darte mi mano sino tambien todo mi cuerpo y sangre para que con mi pan de vida te sustentes y te regales a tus anchuras y que con mi propio espiritu vivas en paz como tu lo deseas y que mis amores sean unico alivio en tus trabajos en esta mortal vida pues si esto es asi y sabes que muero por darte vida dime esposa mia de que te fatigas Dame querida tus bras-sos y dime si me amas como yo te amo (Hoja 4)

148 La antologiacutea de Promis ha procurado insertar entre los textos antoloacutegicos algunos que se refieren a la es-critura de mujeres fundamentalmente de aquellos generados en el interior de los espacios conventuales Estos textos se fundan como laquohistorias de vidasraquo y responden casi siempre a los requerimientos de los confesores de las monjas coloniales En este sentido resulta valiosiacutesima la incorporacioacuten de la llamada Relacioacuten autobiograacute-fica de Sor Ursula Suaacuterez como una muestra significativa de la escritura monjil entendida en esta eacutepoca (como tambieacuten en la tradicioacuten europea medieval) inserta en las denominadas laquolabores de manoraquo de las religiosas ya que el texto escrito por mandato se convertiacutea en una suerte de entramado o tejido linguumliacutestico es decir en un nuevo bordado que la mayor parte de las veces el confesor convertido en censor iba haciendo tachando y enmendando En la antologiacutea Promis agrega un texto de Sor Tadea Garciacutea de la Huerta titulado Relacioacuten de la inundacioacuten que hizo el riacuteo Mapocho de la ciudad de Santiago de Chile en el monasterio de Carmelitas titular de San Rafael el diacutea 16 de junio de 1783 se trata de un poema tipo romance escrito en versos octosilaacutebicos y que da cuenta de lo sucedido ese diacutea en el convento (Resentildea de la literatura del reino de Chile de Joseacute Promis Eddie Morales Pintildea httpwwwupaclpublicaciones2002literatura_promishtm)

149 Son frecuentes las faltas ortograacuteficas Una de ellas es el uso constante del seseo La ausencia de acentua-cioacuten y puntuacioacuten exceptuando alguacuten punto o coma arbitrario no seguido casi nunca de mayuacutescula inicial lo mismo que el uso igualmente aribitrario de la h o de b v r q g j m n x etc No olvidemos de la misma forma la laxitud linguumliacutestica existente en el siglo XVII (no sabemos a queacute parte de eacuteste pertenece el manuscrito) asiacute como la joven edad de la monja

171ESPANtildeOLAS DE ULTRAMAR EN LA HISTORIA Y EN LA LITERATURA

Los versos del presente manuscrito poseen la misma fuerza que tiene su prosa Con una estructura estroacutefica indefinida estaacuten aparentemente corregidos por alguien que tu-vo la oportunidad de conocer personalmente a la autora Muy probablemente se trate del padre al que hace referencia al principio del primer manuscrito laquoMandame el Pd que le declare en que consiste un verdadero amor a Diosraquo a continuacioacuten continuacutea con su caracteriacutestica humildad laquo[O]bedesere y dire lo q Dios me inspire segun mi rudesa y simplisidadraquo (Mss 12959 26) En cuanto a la fuerza pasional de esta joven observamos con cierta tristeza coacutemo aparece sublimada en sus escritos con toda la enegiacutea de una joven mujer llena de intensidad y vida pero encerrada en los liacutemites de un convento Veamos un ejemplo en donde responde el Alma en los siguientes versos

O mi enamorado Jesus O mi dulse y tierno amanteO alegria de los sielos O dulse Jesus amable

(Toda Sentildeor me derrito toda Sentildeor me desagoy quiero vivir por ti ea sentildeor abrasadme) [Tachado en el original]

Toda Sentildeor me derrito toda Sentildeor me desagoy quiero morir por vos ea Sentildeor que ya acabo

Ya tus amores me llaman ya tus perfumes me traencon suspiros y agonias Sentildeor hasta que te alcanse

O mi Jesus amoroso no puedo mas dilatarmeya la pasiensia me falta dulse Jesus abrasadme

(No puedo vivir sin vos no puedo mas dilatarmeya la pasiensia me falta dulse) [Tachado en el original]

No puedo vivir sin vos mi dulse Jesus amablepues me teneis echisada siendo mi esposo y mi Padre

Ay que me abraso Ay que me quemo del Amor deJesus nasareno como no tocan y tantildeen a fuego150

Estos versos llenos de arrebato sublimado conectan con toda la tradicioacuten miacutestica es-pantildeola que se remonta a Ramoacuten Llul y que culmina en el maacutes universal de nuestros

150 En toda la fuerza y simbologiacutea del amor maacutes iacutentimo del maacutes alto y sublime placer de la unioacuten de los amantes tal como lo encontramos en el Cantar de los Cantares y en San Juan de la Cruz Leemos en la Biblia

Ya me he quitado la tuacutenica iquestCoacutemo volver a vestirme Ya me he lavado los pies iquestCoacutemo volver a ensuciarlosMi amado metioacute su mano por el agujero (de la llave) y mis entrantildeas se estremecieron por eacutel Me levanteacute para abrir a mi amado Mis manos destilaron mirra y mis dedos mirra exquisita en el pestillo de la cerradura (5 3-5)

Nos ocurre lo mismo con San Juan de la Cruz en su insuperable poema laquoLlama de amor vivaraquo

iexclOh cauterio suaveiexclOh regalada llagaiexclOh mano blanda iexclOh toque delicadoque a vida eterna sabey toda deuda pagaMatando muerte en vida la has trocado

172 JUAN FRANCISCO MAURA

miacutesticos San Juan de la Cruz Esta tradicioacuten se extiende hasta finales del siglo XVII esto es hasta los finales del Barroco siendo un poco maacutes tardiacuteo en la Ameacuterica espantildeola Sin tener como propoacutesito discutir en el presente trabajo a queacute corriente miacutestica pertenece la obra de Sor Nada es necesario resaltar no obstante el hecho de que estaacute escrito por una mujer y ademaacutes de tierna edad El manuscrito 12959 Caja 26 termina con estas pa-labras laquo[T]odas estas boverias escrivi por entretenimiento siendo resien profesa en la religion Sor Nadaraquo Mas no por la juventud de su autora los escritos dejan de tener lo-gradas metaacuteforas imaacutegenes y siacutembolos sacados de la naturaleza La alegoriacutea de la unioacuten matrimonial poseeacute el fuego liacuterico de la maacutes apasionada de las relaciones amorosas vivi-ficada por perfumes flores insectos animales escarchas nieves o abrojos Por lo tanto aunque la narracioacuten destile cierta ingenuidad no carece por ello de un vocabulario rico con el sabor popular de la poesiacutea de los cancioneros y romances de tradicioacuten renacen-tista No ha sido otra mi intencioacuten que la de rescatar del olvido unos escritos en prosa y en verso llenos de frescura y espontaneidad que nos muestran la pasioacuten con que la joven novicia se laquoentrega en cuerpo y almaraquo a los menesteres de su profesioacuten guiada por un padre espiritual en esos primeros antildeos de formacioacuten Esta ha sido la razoacuten por la que presento a continuacioacuten el citado manuscrito en su totalidad

Sor Nada (Mss 1295928)

laquoEsplicacion sobre en que consiste la paz del AlmaraquolaquoQuartillas a un Alma que padece soledad interiorraquo

[7 hojas utiles en 4ordm letra del siglo XVII]

+

Esplicacion sobre en que consiste la paz del Alma

Pareseme segun mi rudo entender que la verdadera paz del Alma con-siste en una muy pura y buena consiencia en un corason liso y bien intensionado en una verdadera rectitud de espiritu en el qual el Alma procura bolar a Dios sin jamas detenerse a respetos umanos ni reparar en que me diran ni de que me censuraran sino me apresuro a seguir a unos entenderes y pareseres dorados en los quales pretende el mundo engantildear y ensuciar si se puede la puresa de un corason unicamente de Dios y de su Santa ley y se lo conserva cristalino con la divina asis-tencia de la gracia y comprendido de su Amor y temor siguiendo la luz divina de tan amante Sentildeor Dios y ombre verdadero con que este ilustrado corason ni se altera ni se mueve por los disfrasses dorados que ase el mundo y sus moradores mayormente con falssas amistades aunque con ellos muestre buena intension Con la misma grasia y luz de Dios conose el buen corason estos disfrasses que le ase el mundo y se retira de todo con espiritu y valor esto sin la menor alterasion sino que en suma paz se retira a buscar a Dios dentro de su mismo corason

173ESPANtildeOLAS DE ULTRAMAR EN LA HISTORIA Y EN LA LITERATURA

y se abrasa con su pura verdad en la qual se le descubren mil interio-res secretos tan solidos puros y verdaderos que la misma Alma queda abismada y de puro grandes no los puede bien comprender ni esplicar pero estos mismos secretos divinos le sirven de espuelas para no solo correr sino bolar con pies de plumas en seguimiento de su bien ama-do Jesus y como este soberano Sentildeor es tan amante de sus espossas las Almas luego que la ve bolar con pies de plumas la sale al encuen-tro en despoblado campo que se deve de llamar Campo de Amor de Dios y el mismo Sentildeor se viene a las manos por ser Dios que nos ama con Amor infinito de Padre benigno y amoroso con que asiendose en contra deso este divino enamorado en lo interyor de el Alma que le busca con ansias de servirle y amarle y en aquella soledad traban una conversasion amorosa y sensilla como la pluma simple de quien esto escrive

Divino enquentroDios y el Alma en la soledad

O Soberano Principe de la paz dise el Alma tus perfumes me traen a ti bolando porque alla en el mundo y sus valedores me pretendian engantildear y entretenerme con pegaminossas amistades que facilmen-te me pudieran envenenar y matarme apartandome de ti Mi dulse Jesus amable mi Redentor Soberano que con tantas ansias me sales al enquentro como siervo [ciervo] erido de mis Amores los quales tu Amor me ofrese para que con tu mismo Amor te ame y te sirva en paz sin perturbarme ni contristarme ni cansarme de padeser pasando si se ofrese por escarchas nieves espinas ni abrojos ni por otros diverssos trabajos ni piedras de contradision que tu me puedes permitir pues por mas que el mar se levante con sus ferosses olas contra mi ni piedras se me tiren al rostro en todo Sentildeor me quieres con serenidad pasifica sin la menor perturbasion Todo Sentildeor quieres que lo tome con Serenidad de espiritu y asi vengo a ti bolando para que mejor me ensentildees a vivir segun las leyes de tu noble condision que me son muy agradables por mas que el mundo me las despresie por segir sus vanidades y torsidas intensiones con apariensias de bien y con este engantildeo y bien me quie-ro mas a mi que no a mi proximo veo que segun mi pareser se pierden muchas Almas y tambien de aquellos que se depresian y pasan por muy espirituales Con que me paresen pocos los que llegan a padeser con desnudes151 de espiritu por tu purisimo Amor y me parese essas se quedan muy atrasadas en la virtud por el peligro de bolver muy atras el paso de modo que se pueden despentildear y pereser en su misma desgra-sia ya por soberbia o por otras enfermedades que se les pega al corason y asi lo pasan como siegos ignorantes sin advertir en sus peligros

151 La letra en cursiva es miacutea

174 JUAN FRANCISCO MAURA

este aquerdo Sentildeor y otros que tu verdad me ensentildea me ase venir uyendo de las paredes del mundo y me vengo a ti Dios mio bolando con las dos Alas del Amor y temor que tu mismo Amor me ofrese tan de gracia y tan de grado que no se duentildeo mio con que lo responder a tan soberano beneficio y finesa de tus entrantildeas de Amorvengo Sentildeor y esposo mio unicamente a descansar en ti pues los peli-gros del camino me an puesto en mucho sobresalto temiendo el per-derte y sin ti perderme para siempre por una eternidad sin fin pues deseo amado mio ganarme ganandote a ti y vivir en ti aora en vida y despues eternamente y estos cuidados me traen fatigada molida y cansada y no podre tener alivio y descanso sino viendome entre tus brassos aunque sea estando en cruz pues ese es el fin de mis deseos vivir y morir en ti ablame mi cordero manso y ensentildeame a que ver-daderamente te ame como fiel esposa ea mi caro amigo dame la ma-no pues sabes Amor mio que en mi no ay mano sin tu misma mano y asi mi Dios y Sentildeor mi Principe Soberano con umilde rendimiento y deseos de alcansarte te suplico me des la mano y me consueles en estos mis trabajos Deseo Sentildeor vivir en paz y los malos amores de mi Naturaleza flaca no me dejan detentar y no quieren por mi desgrasia atropellar con las leyes de tu Amor ni quisiera perturbar mi corason quando me veo con un torvellino de olas y contratiempos que a menu-do me suelen sercar pero si tu Sentildeor me das la mano nada temo sino que me aseguro y vivire en paz sin que me fatiguen los contratiempos pues mi mano en la tuya y mi espiritu en el tuyo por mas borrascas que me envistan no seran bastantes para rendir mi voluntad a la suya bien si para pronunsiar un fiat que resuene bien atras en tus oidos y que en medio de mis fatigas me ponga a cantar tus divinas misericor-dias hea Sentildeor ya pretendo serrar mis labios por no desir mas bove-rias y deseo Sentildeor oir tus palabras de vida eterna abla Sentildeor que tu sierva oye con atension y cuydado mira mi Dios que se me ase tarde y espero con prisa deseando saborearme y aprovecharme de los ecos de tu Santa dotrina pues todas tus palabras saben a eterna vida callen pues mis sentidos y potensias y todo se ponga en paz pues mi dulse y soberano Sentildeor no se escusara de ablar me aun que en mudo silensio hea mi gran Prinsipe de la paz ablame que tus puros amores me traen perdida por estos asperos montes y mis cortos pasos no te pueden dar alcanse mirame mi Dios a tus pies postrada como un vil gusano y me-nor ormiga de la tierraabla Jesus y dise a su esposa el Alma querida esposa mia que me pides y por que te muestras tan fatigada y mal sufrida no vives como corde-rita del campo buscando de mis pechos el sustancial pasto mi Amor no te sustenta y mi grasia te promete eterna vida pues dime amada de que te fatigas y te muestras mal sufrida mira que te amo con Amor de padre y con Amor de esposo el mas fino y puro enamorado que no tan solo me presio de darte mi mano sino tambien todo mi cuerpo y

175ESPANtildeOLAS DE ULTRAMAR EN LA HISTORIA Y EN LA LITERATURA

sangre para que con mi pan de vida te sustentes y te regales a tus an-churas y que con mi propio espiritu vivas en paz como tu lo deseas y que mis amores sean unico alivio en tus trabajos en esta mortal vida pues si esto es asi y sabes que muero por darte vida dime esposa mia de que te fatigas Dame querida tus brassos y dime si me amas como yo te amoResponde el Alma152 Tu mi Dios sabes si yo te amo pues de mi solo se que mis deseos y ansias buelan a ti mas no alcanso a saber si te amo como tu de-seas ser amado y como desconfio tanto de mi y de mis prosederes falssos temo Dios mio perderme y perderte y asi Sentildeor pues no desechas mis Amores y te muestras tan fino en amarme te pido me ensentildees a vivir segun las leyes de tu pura verdad y fina condisionhija mia dise Dios la prueva de un verdadero Amor consiste en sufrir callar y padeser por mi unico Amor y en todo seguir mis pasos sin ja-mas retroseder por mas fragoso que se muestre el camino pues nunca seran tantas las espinas las escarchas ni las nieves ni los vientos bo-rrascosos que te se ofrescan pasar por mi Amor como los que mi tierno y desinteresado Amor paso por ti y siempre con mis pies descalssos y asi hija y esposa mia muestrate costante en seguir lo perfecto de mis passos pues mi braso fuerte sera en ti y peleara por ti y te sera el todo en tus nesesidades y mi Amor te convertira en dulse y suave lo amargo y molesto a la condision de la carrne

Responde el Alma

O mi enamorado Jesus O mi dulse y tierno amanteO alegria de los sielos O dulse Jesus amable

(Toda Sentildeor me derrito toda Sentildeor me desagoy quiero vivir por ti ea sentildeor abrasadme) [Tachado en el original]

Toda Sentildeor me derrito toda Sentildeor me desagoy quiero morir por vos ea Sentildeor que ya acabo

Ya tus amores me llaman ya tus perfumes me traencon suspiros y agonias Sentildeor asta que te alcanse

O mi Jesus amoroso no puedo mas dilatarmeya la pasiensia me falta dulse Jesus abrasadme

(No puedo vivir sin vos no puedo mas dilatarmeya la pasiensia me falta dulse) [Tachado en el original]

No puedo vivir sin vos mi dulse Jesus amablepues me teneis echisada siendo mi esposo y mi Padre

152 La aparicioacuten de una mayuacutescula al principio de una oracioacuten es algo totalmente arbitrario en este ma-nuscrito dada la libertad ortograacutefica de la autora Como se puede observar en la mayor parte de las veces no es el caso

176 JUAN FRANCISCO MAURA

Ay que me abraso Ay que me quemo del Amor deJesus nasareno como no tocan y tantildeen a fuego

Responde Jesus Hija mia tus simples vozes oygo y aunque resuenan bien a mis oidos pero te deseo mas mansa y pasifica en tus fervores ya sabes que no siempre as de vivir en mantillas ni a los pechos de tu Madre por que es rason que padescas con espiritu fuerte como mu-jer valerosa por que a una esposa del Rey soberano y prinsipe de la paz no le estan bien chiquerias ni fervores de nintildea malcriada y ya es ora que la destete su Madre la Naturaleza y que empesando su nueva vida camine con el favor de mi grasia sigiendo mis passos de eterna vida esto con sus pies descalssos segun mis leyes de Amor puro y desinteresado lo tienen ordenado153 y vivir en paz como lo deje en-cargado a mis apostoles Santos repitiendoles varias vezes Vivir en pas y caridad esto es un vivir en Dios y Dios en el Alma y asi hija mia el Alma que vive en paz vive en mi Como mis cortesanos en el cielo y pues me pides que te ensentildee a vivir segun las leyes de mi condision Repito el desir que te debes mostrar sufrida en todo tiempo y estado sin permitir en tu corason que ni aun los fervores se adelanten con estremos ni ademanes sino atiende y aprende de mi purisima Madre pues siempre la veras si bien lo consideras que mientras vivio en el mundo en todos sus trabajos se mostro firme fuerte costante como piedra diamante Pues mirandome nintildeo entre sus brasos desnudo en el pesebre desnudo y crusificado en los brassos de una cruz En estos y otros passos no se mudo su rostro sino que en suma serenidad y pasifico corason toda se sacrificaba enteramente en los brassos de mi Amor y rendido su corason y voluntad en la de mi eterno Padre por ejemplo te la doy y deseo que aprendas de sus nobles calidades pues te aseguro carisima que las leyes de mi condision y pura verdad todo lo allaras enserrado en el corason de mi purisima Madre sedle fiel y descansaras en paz

+

Quartillas a un alma que padese soledad interior

1Un Alma afligida y tristese ve en un campo desiertay en el su esposo la tieneAtormentada y sedienta

153 Es a traveacutes de estas liacuteneas lo que hace suponer que la autora de este diaacutelogo amoroso entre el Alma y Je-suacutes es novicia esto es laquoque estaacute empesando su nueva vidaraquo En las mismas liacuteneas una vez maacutes se hace alusioacuten al laquodesteteraquo de su vida civil laquoa una esposa del Rey soberano y principe de la paz no le estan bien chiquerias ni fervores de nintildea malcriada y ya es ora que la destete su Madre la naturalesaraquo (fol 5)

177ESPANtildeOLAS DE ULTRAMAR EN LA HISTORIA Y EN LA LITERATURA

2Pendiente se ve en el AyreSolo un hilo la sustentasin tocar el pie en el sueloporque del no tome tierra

3Mirandola esta yto a ytoaquel sol que la atraviesay la enviste con sus rayosmas ella no pestantildeea

4Como sigarra padese y como a tal se atormentabatiendo sus mismas Alasy el corason se atraviesa

5Con penas sustos temoresquando se mira assi mesmasin tener valor en nadaporque es la misma flaquesa

6Pero el Amor de su esposotoda su atension le llevay la pone en un abismopero cubierto en tiniebla

7Desea dar algun bueloy subir con ligeresapero se mira travadacon una fuerte cadena

8Clama suspira y padeseMas del todo se sujetaRindiendo su voluntadA la divina clemencia

9Los enemigos del AlmaCruelmente le asen guerray ella aunque firme y constantelos reselos la atormentan

178 JUAN FRANCISCO MAURA

10de todos modos padeseaunque gosa la asistensiadel divino esposo amadoque en su interior se recrea

11Solo de verla penary con verla tan serenadise resibe mil gustosde su sigarra pequentildea

12Le sabe el mundo a mil yelesy su trato le atormentaviendo en el mil falsedadesque todas saben a tierra

13Para poderse librardeja de correr y buelacon las Alas del Amory el mismo Amor se la lleva

Una vida dedicada a un amor divino un amor que le haraacute llenar un buen nuacutemero de cuartillas dedicadas a tan alta empresa Se desconoce si la vocacioacuten de Sor Nada con-tinuoacute con tanta intensidad el resto de sus diacuteas Ciertamente la vida en el covento no era faacutecil En algunos casos la experiencia era traumaacutetica incluso fatal para algunas de las adolescentes de la Ameacuterica Espantildeola Las reglas del claustro eran severas por varias razones Estas joacutevenes si no teniacutean el permiso de la superiora no podiacutean recibir visitas no podiacutean volver a sus casas su correspondencia era censuraba y no podiacutean salir del periacutemetro conventual Igualmente se levantaban antes del amanecer para oir misa tra-bajaban el resto del diacutea y lo maacutes interesante es que muchas veces esta vida era aceptada por muchas

Page 17: Tercera parte: Mujeres en la vida intelectual - …parnaseo.uv.es/Editorial/Maura/TerceraParte.pdf · La Biblia, por su parte, hace repetidas menciones de la mujer y sobre el comporta-

147ESPANtildeOLAS DE ULTRAMAR EN LA HISTORIA Y EN LA LITERATURA

las ropas de seda como en las de pantildeo en los ruedos de las faldas y para las costuras y no otra cosa alguna y que no traigan la dicha seda en las guarniciones de las mulas ni en angarillas ni en sillas ni en pantildeos ni en otra cosa alguna y que ansiacute mismo no puedan traer mantillas de seda ni enforradas en seda sopena que l que contrario hiciere pierda las ro-pas que ansiacute trujere vestidas por primera vez y sea repartido la mitad para el juez que lo juzgare y la otra mitad para el juez que lo acusare y por la segunda que pierda la ropa y se parta como dicho es y sean desterrados de la isla donde viviere para dos antildeos y por cuanto algu-nas personas de los que nuevamente destos reinos de Castillaa van a se avecindar y poblar y estar en las dichas Indias y son de honra acae-ce que no llevan tantos bienes que valgan la dicha cuantiacutea de los mil castellanos que mando que tengan los que hubieren de traer seda en la manera que dicha es que a eacutestos tales no se entienda y extienda lo suso dicho y que puedan traer la dicha seda seguacuten y en la manera que dicha es y no maacutes hasta tanto que haya un antildeo que estaacuten en las dichas Indias que corra y se cuente desde el diacutea que llegare fasta ser cumplido y que siacute cumplido no tuviere bienes que valgan la dicha cuantiacutea de los dichos mil castellanos que no puedan traer seda ninguna so la dicha pena de suso contenida la cual mando a vos las dichas nuestras justi-cias y a cada una de vos que esta mi carta y todo lo en ella contenido y cada cosa y parte dello guardeacuteis y cumplaacuteis y ejecuteacuteis por manera que se cumpla y ejecute lo en ella contenido so pena de perdimiento de los oficios y que seades inhaacutebiles para haber otros semejantes y que pagueis la estimacioacuten de la tal ropa que dejardes de ejecutar y para que lo susodicho sea notorio y ninguno dello pueda pretender ignorancia mando que esta mi carta sea pregonada puacuteblicamente por las plazas y mercados y otros lugares acostumbrados desas dichas islas por prego-nero y ante escribano puacuteblico(Konetzke Coleccioacuten 23)135

Tambieacuten se sabe de las joyas que Rodrigo Ponce de Leoacuten marqueacutes de Caacutediz debioacute dar a dontildea Beatriz Pacheco (M Fernaacutendez de Navarrete 75 22) Lo que siacute queda claro es que la navegacioacuten seraacute a partir de estos antildeos la forma maacutes raacutepida e importante para comerciar con aquellos paiacuteses de Oriente que antes soacutelo era posible alcanzar a traveacutes de rutas terrestres Existe un documento muy representativo de este periodo sobre la posesioacuten de joyas de gran valor por parte de miembros de una de las familias maacutes repre-sentativas residentes en Ameacuterica Los protagonistas son en este caso el almirante Diego Coloacuten y su mujer Mariacutea de Toledo Dice el documento que El jurado Antoacuten Bernal y Juana de Hoces su mujer vecinos de Sevilla en la collacioacuten de Santa Cruz reciben de Diego Coloacuten Almirante de las Indias laquoun joyel muy rico de oro de hechura de escudo que tiene en medio una piedra preciosa grande esmeralda e debaxo de la dicha piedra un rostro de aacutengel labrado en el mismo oro esmaltado e a cada lado del dicho rostro una piedra preciosa diamante pura y debaxo una piedra gruesa pendiente que pesa el dicho

135 AGI Indiferente 418 Libro 2 fol 87v Publicada en DH Am Tom 6 paacutegina 191 DIA Tomo 31 pag 470 DIU Tomo 5 paacuteg 166 Seguacuten la RC a Diego Coloacuten fechada a 14 de noviembre de 1509 es la pragmaacutetica que se guarda en Castilla sobre la manera de vestir (DIU Tomo 5 paacutegina 174)

148 JUAN FRANCISCO MAURA

joyel con todo lo susodicho medio marcoraquo Los citados Antoacuten Bernal y su esposa se dan por pagados de todo lo que se les adeudaba y se obligan a su vez a devolver el joyel al Almirante si este les paga en dinero El 23 de agosto de 1530 siete antildeos despueacutes la virreina canceloacute la anterior obligacioacuten y recuperoacute el mencionado joyel (AHPS Libro del antildeo 1523 Oficio I Escribaniacutea Alonso de la Barrera Folio 1173 Fecha 3 de diciembre) En la misma casa del almirante otra mujer Briolanga Muntildeiz su tiacutea materna se obliga a pagar al mercader genoveacutes Batista Catantildeo 22 ducados de oro laquopor cierto raso que le comproacute y habiacutea de ser pagado en el puerto de Santo Domingoraquo (AHPS Libro del antildeo 1509 Oficio V Libro uacutenico Escribaniacutea Francisco Esquibel Folio Primer tercio del lega-jo Fecha 9 de marzo) Dontildea Briolanga recibiacutea cada antildeo para su mantenimiento 100000 maravediacutes del almirante mayor de las Indias por medio de Gaspar Gurricio monje del monasterio de Santa Mariacutea de las Cuevas (AHPS Libro 1510 Oficio XV Libro II Es-cribaniacutea Bernal Gonzaacutelez Vallesillo Folio primer tercio del legajo Fecha 4 de julio) Resulta interesante hacer notar la temprana presencia (1516) de un ingleacutes en Santo Domingo involucrado igualmente en la compra de telas Se trata de laquoNicolas Arnoteraquo residente en Santo Domingo que debe pagar a Mariacutea Caldera mujer del comendador Diego Barbosa el valor de una cama de sargas de colores de Flandes (AHPS Libro del antildeo 1516 Oficio XV Libro II Escribaniacutea Bernal Gonzaacutelez Vallesillo Folio Primer tercio del legajo Fecha 28 de agosto) Sin embargo anteriormente a esa fecha (1514) encontramos a un veneciano casado con una inglesa mucho maacutes ceacutelebre en sus viajes trasoceaacutenicos laquoSevastiaacuten Cavotoraquo capitaacuten del rey don Fernando y vecino de Sevilla136

De forma paralela se observa tambieacuten un cierto desenvolvimiento de la mujer en su medio lo que equivaliacutea a intercambios de informacioacuten a todos los niveles incluyendo por lo tanto el cultural No era extrantildeo que tuviesen libros de comedias a mano y que llegasen incluso a escribir comedias ellas mismas Efectivamente la sospecha de que las damas llegasen a escribir comedias estaba bien fundada Veacuteanse algunos ejemplos Ana Caro Malleacuten de Soto una de las maacutes famosas dramaturgas de la Sevilla del siglo XVII autora de El conde de Partinupleacutes utiliza el tema del amor en sus maacutes diversas variantes fiacutesicas y espirituales como el eje de casi todas sus obras (Perry 57) Este hecho por otra parte indica el favor del puacuteblico ante un tema tan popular Veacutease otro ejemplo

The drama of this period did not present love and marriage as a simple partnership however and many dramatists contrasted laquoprofaneraquo with laquohonestraquo love Feliciana Enriacutequez de Guzmaacuten who wrote Tragicome-dia Los jardines y campos sabeos in Seville in the early seventeenth cen-tury presented the hero Clarisel as the victim of laquopervertedraquo and fickle Belidiana in part 1 so blinded by her beauty that he feels himself laquoin shackles and in chainsraquo (Perry 57)

Pero las damas espantildeolas de esta eacutepoca no soacutelo escribiacutean comedias algunas tambieacuten se aventuraron a escribir tratados cientiacuteficos Uno de estos casos fue el de Oliva Sabu-co de Nantes Barrera que a finales del siglo xvi escribioacute un tratado meacutedico sobre la naturaleza humana advirtiendo que la lujuria podiacutea perjudicar al cuerpo Se basaba en

136 Sebastiaacuten Caboto o laquoSevastiaacuten Cavotoraquo estaba casado con Juana Cavoto vecina que fue de la ciudad de Londres en la parroquia de San Gil (AHPS Libro del antildeo 1514 Oficio I Libro II Escribaniacutea Mateo de la Cuadra Folio 253 Fecha 14 de Septiembre) citado en CFAAPS Vol 3 doc 128 p 37

149ESPANtildeOLAS DE ULTRAMAR EN LA HISTORIA Y EN LA LITERATURA

la presuncioacuten de que la lujuria provocaba que el cerebro emitiese un liacutequido que iba al estoacutemago enfriaacutendolo y debilitaacutendolo interrumpiendo de esta manera las funciones vitales (Perry 58)

Se sabe que en la eacutepoca de Isabel la Catoacutelica habiacutea muchas mujeres estudiantes y que la propia reina las impulsaba a estos menesteres iniciativa que obtuvo sus frutos en las deacutecadas siguientes Ademaacutes de las conocidas novelistas Mariacutea de Zayas y Sotomayor y dontildea Mariana de Carvajal existioacute toda una serie de escritoras de todos los geacuteneros lite-rarios que florecieron a ambos lados del Atlaacutentico y que no solamente llaman la aten-cioacuten por su nuacutemero sino por la calidad de sus obras Algunas de ellas como dontildea Luisa de Padilla condesa de Aranda calificada por Serrano y Sanz como laquola maacutes notable de cuantas florecieron en Espantildea en el siglo XVIIraquo personificaraacuten a la perfeccioacuten a este tipo de mujeres Tambieacuten deberiacuteamos saber cuaacutentas seriacutean las mujeres que escribieron con pseudoacutenimos masculinos

La informacioacuten sobre las diferentes facetas de la vida femenil con que contamos no es abundante A pesar de todo podemos hacernos una idea maacutes clara de la verdadera situacioacuten de la mujer a traveacutes de una nueva interpretacioacuten de los textos tanto de los medievales como de las croacutenicas de los primeros antildeos del descubrimiento y conquista Algunos estudios relativamente recientes surgidos por el intereacutes general que suscita todo lo concerniente a la mujer han ayudado a considerar nuevas perspectivas La eru-dicioacuten moderna estaacute poniendo en tela de jucio los estereotipos tradicionales en cuanto a la pasividad y relevancia femeninas asiacute como al tradicional misogenismo que se atri-buye a la eacutepoca medieval Cada vez estaacute maacutes claro que la existencia de estas mujeres variaba considerablemente seguacuten la eacutepoca posicioacuten social o situacioacuten geograacutefica por lo que hacer valoraciones categoacutericas sobre laquola situacioacuten de la mujerraquo puede llevar a graves equivocaciones (Dillard 9) Es fundamental para comprender a la mujer espa-ntildeola que pasoacute al Nuevo Mundo tener en cuenta las enormes diferencias de todo tipo que existieron en la sociedad castellana y novomundista Un pintoresco ejemplo es el de laquolas tapadasraquo una usanza de origen aacuterabe que se pondriacutea de moda en Castilla poco despueacutes de la toma de Granada por los Reyes Catoacutelicos y que despueacutes pasariacutea al Peruacute Esta tradicioacuten ha perdurado en algunos pueblos de Espantildea hasta relativamente poco tiempo pueblos como Mojaacutecar (Almeriacutea) y Vejer de la Frontera (Caacutediz) son ejemplo de esta costumbre tambieacuten conocida como el de las laquocobijaacutesraquo

Tras la caiacuteda del reino musulmaacuten de Granada en 1492 la corona espa-ntildeola prohibioacute a las mujeres aacuterabes de Andaluciacutea vestir los velos islaacutemi-cos que cubriacutean sus rostros y ocultaban su identidad No era faacutecil des-arraigar esta costumbre tan ancestral y secular y el emperador Carlos asiacute como su hijo el rey Felipe II tuvieron que repetir la prohibicioacuten Cuando finalmente las moras fueron obligadas a abandonar sus velos y a adoptar el chal castellano comenzaron a utilizar la nueva prenda para cubrir sus rostros dejando al descubierto soacutelo uno de los ojos Esta nueva moda en el uso del chal tradicional nos asegura leoacuten Pi-nelo era extremadamente graciosa sensual y atractiva a causa de la belleza exoacutetica de los ojos de las moras Las mujeres cristianas de Granada Coacuterdoba y Sevilla imitaron pronto la nueva moda de llevar el chal y asiacute nacioacute la laquotapadaraquo hispana Desde Sevilla la nueva moda

150 JUAN FRANCISCO MAURA

fue a las colonias de ultramar y tomoacute raices especialmente en el Peruacute (Martiacuten 317-18)

En un reciente estudio sobre la educacioacuten de la mujer en la Ameacuterica virreinal apare-cen algunos ejemplos significativos de mujeres espantildeolas que consagraron gran parte de sus vidas a la tarea docente Dentro del proceso educativo de las espantildeolas que fueron a las Indias destaca el papel de dontildea Catalina de Bustamante Joseacute de Jesuacutes Vega y Ma-riacutea Luisa Caacuterdenas de Vega dicen en su obra Ameacuterica Virreinal La Educacioacuten de la mujer que esta mujer pocos antildeos despueacutes del descubrimiento del Nuevo Mundo se dedicoacute a trabajar en favor de los indios aunque por desgracia su nombre y sus hechos en la labor docente hayan sido ignorados por los historiadores modernos (Vega 12-13)

Son varias las veces que se nombra a Catalina de Bustamante en el citado estudio y varias las fuentes antiguas en que se recoge la presencia de tan distinguida laquomatrona muy honrada y de buen ejemploraquo de la que ya hablaba Zumaacuterraga y sobre la que se hizo un informe enviado a Carlos V describiendo sus actividades en la Nueva Espantildea firmado por cuatro de los misioneros maacutes conocidos de Meacutexico

El informe dice que los franciscanos de Texcoco acababan de cons-truir un nuevo monasterio y cedido el antiguo A una honrada y honesta y muy virtuosa matrona que se dice Catalina de Bustamante para que ende instruyese a las hijas de los sentildeores de la comarcala cual con el favor de Dios y limosnas que don Hernando [Corteacutes] les haciacutea para su sustentacioacuten [teniacutea en esa casa-hogar] hasta trescientas mujeres antes maacutes que menos (Vega 14)

Estas laquocasas-hogarraquo no estaban regentadas necesariamente por monjas sino por lo que llamaban laquobeatasraquo mujeres que sin estar estar sujetas a la autoridad eclesiaacutestica se dedicaban a un laquolucro honestoraquo Llamadas tambieacuten laquobeateriosraquo eran diferentes a los conventos de monjas y constituiacutean las primeras escuelas de la mujer en la Nueva Espa-ntildea (Vega 20-21) Fue gracias al ejemplo de mujeres como Catalina de Bustamante que dedicaron sus vidas a la educacioacuten de los indiacutegenas que existiesen otras continuando su ejemplo Motoliniacutea dice claramente que laquode ese primer encerramiento (el de Texcoco regentado por Catalina) salieron otras honestas y muy virtuosas duentildeas que ensentildeaban a las maacutes menudasraquo (Vega 23)

Pero dontildea Catalina de Bustamante pese a ser una singular mujer y la iniciadora de la educacioacuten de la mujer en Meacutexico no fue un caso aislado corresponde maacutes bien a un patroacuten al que se ajustaron muchas de las pioneras de la Nueva Espantildea que sembraron instituciones de educacioacuten de la mujer En 1530 unos antildeos maacutes tarde aparecioacute una de las grandes protectoras de la instruccioacuten femenina en Ameacuterica La emperatriz Isabel de Portugal (Vega 24)

Desde comienzos de la conquista fueron varios los centros docentes regentados por mujeres en los que la ensentildeanza no estaba impartida por monjas Una de las institucio-nes maacutes sobresalientes del sistema educativo fue el Colegio de Nintildeas que se establecioacute en la ciudad de Meacutexico a principios del siglo XVI con maestras que no eran monjas Estas seglares conocidas comunmente como laquomigasraquo eran las descendientes de las antiguas beatas Su ubicacioacuten permanente fue determinada en 1548 lugar que serviriacutea de escue-la ininterrumpidamente hasta 1862 cuando el edificio fue convertido en bodega (Vega 60) No se debe perder de vista que no soacutelo por el hecho de llevar una vida secular se

151ESPANtildeOLAS DE ULTRAMAR EN LA HISTORIA Y EN LA LITERATURA

gozaba de maacutes privilegios Era maacutes bien al contrario En las carreteras las mujeres segla-res no inspiraban el mismo respeto que las monjas que ademaacutes teniacutean contacto cons-tante con personas de los dos sexos no pertenecientes a la Iglesia (Arenal 297) Ademaacutes dentro de las murallas del convento desapareciacutean muchas de las barreras sociales que limitaban a la mujer de esta eacutepoca

La presencia femenina y la monarquiacutea

Pues iquestcoacutemo sabes tuacute preguntoacute don Quijote que los grandes llevan detraacutes de siacute a sus caballerizos Yo seacute lo direacute respondioacute Sancho Los antildeos pasados es-tuve un mes en la corte y alliacute vi que paseaacutendose un se-ntildeor muy pequentildeo que deciacutean que era muy grande un hombre le seguiacutea a caballo a todas las vueltas que daba que no pareciacutea que era su rabo Pregunteacute que coacutemo aquel hombre no se juntaba con el otro sino que siempre anda-ba tras deacutel Respondieacuterome que era su caballerizo y que era uso de grandes llevar tras siacute a los tales Desde enton-ces lo seacute tan bien que nunca se me ha olvidado (Cervan-tes Don Quijote)

Los monarcas espantildeoles fueron conscientes de que sin la presencia femenina difiacute-cilmente se podriacutea solidificar una conquista a todos los niveles La mayor parte de los virreyes y altos cargos trajeron a sus mujeres con ellos y en las ciudades principales de Hispano-Ameacuterica como la ciudad de Meacutexico Guatemala Lima o Potosiacute habiacutea mujeres que disfrutaban de una esmerada educacioacuten (gramaacutetica latiacuten poesiacutea historia muacutesica) Esto dariacutea origen a una elegante y hasta cierto punto sofisticada sociedad en la que las mujeres tomaron parte en asuntos maacutes importantes que los que sus homoacutelogas toma-ran en las colonias portuguesas laquoThere were brilliant vice-regal courts at Mexico City and Lima far exceeding anything that could be found in Portuguese or English America during the seventeenth centuryraquo (Boxer 39) Las estadiacutesticas con las que contamos hoy no soacutelo demuestran que las mujeres llegaron al Nuevo Mundo en respetables porcen-tajes sino que ademaacutes tuvieron una participacioacuten activa llegando a intervenir en algu-nos casos en las liacuteneas de vanguardia Resulta difiacutecil aproximarse al estado de aacutenimo de aquellas mujeres que vivieron en eacutepocas tan lejanas Para ello es necesario indagar en los documentos de la eacutepoca para lograr rescatar del pasado todos esos tesoros de la historia muchas veces tergiversados y manipulados con el fin de que sirvan a propoacutesi-tos actuales Es en los viejos manuscritos donde queda testimoniada su presencia tan rica en dolores tragedias y por queacute no en amores Fue la llegada de estas mujeres una brisa de esperanza y de ilusioacuten para aquellos que ya estaban en las tierras de ultramar y

152 JUAN FRANCISCO MAURA

veiacutean venir de su propia tierra aquello que maacutes antildeoraban amantes madres hermanas Un haacutelito de vida y poesiacutea que suavizaba las costumbres de estos rudos y romaacutenticos pioneros laquoporque para ser hombres de tales empresas algo de romaacutentico debioacute de existir en ellos y que es tan propio del espantildeol y abandonariacutean en brazos tan gentiles sus bruscos modales que habiacutean adquirido en aacutespero contacto en selvas y montantildeasraquo (Villafantildee 125)

Hoy sabemos que en la normativa oficial de la Espantildea del siglo XVI y XVII se favoreciacutea el paso de mujeres al Nuevo Mundo Afirmar lo contrario no solamente es falso sino que implica un desconocimiento total de los primeros dos siglos de la colonizacioacuten espantildeola La presencia de estas mujeres espantildeolas fue efectiva laquolas disposiciones al respecto demuestran claramente que se teniacutea especial intereacutes en su arraigo y que se tra-taba de defender su posicioacuten de mujeres casadas con conquistadores y colonizadoresraquo (Villafantildee 126) Los monarcas comprendiacutean que era praacutecticamente imposible que los hombres viviesen sin mujeres y que de ser asiacute era de esperar que se cometiesen abusos con las indias lo que incidiriacutea en la moral social y en el buen gobierno de la colonia Ademaacutes sin un asentamiento definitivo con hogares y familias difiacutecilmente se podriacutea llevar a cabo una presencia permanente en las nuevas colonias (Orsquo Sullivan-Beare 45)

Empezando por los Reyes Catoacutelicos la preocupacioacuten de que en las colonias se esta-bleciesen nuacutecleos que tuviesen como base la familia cristiana fue clara Las capitulacio-nes que a este efecto se hicieron entre los conquistadores y la Corona fueron nume-rosas La efectuada entre Rodrigo de Baacutestidas y Carlos V puede ser un buen ejemplo Fechada en Valladolid el 6 de noviembre de 1524 muestra el propoacutesito de Baacutestidas de establecer una colonia permanente en la desembocadura del riacuteo Magdalena en el terri-torio que hoy vendriacutea a corresponder a Colombia El documento firmado por el Empe-rador comienza asiacute

El Rey Por cuanto por parte de vos Rodrigo de Baacutestidas vecino de la ciudad de Santo Domingo de la Isla Espantildeola Me fueacute fecha relacioacuten que por servicio de la Catholica Reyna Mi Sentildeora e Nuestro os ofre-ceacuteis de poblar e poblariades la provincia e puerto de Santa Marta que en Castilla de Oro llamada la Tierra Firme e que la poblariades dentro de dos antildeos siguientes haciendo en ella un pueblo en que no menos haya en eacutel al presente cincuenta vezinos que los quince de ellos sean casados y tengan consigo a sus mujeres y que lo teniades fecho dentro de dos antildeos y de hoy en adelante lo maacutes que fuese posible asiacute de cris-tianos espantildeoles como de indios (Restrepo 1 30)

De igual manera el priacutencipe Felipe (futuro Felipe II) en las capitulaciones establecidas en 1547 con Juan de Sanabria para que eacuteste fuese como gobernador y capitaacuten general de la dicha provincia escribe lo siguiente laquoPrimeramente que seais obligado e os obligeis a llevar destos Reynos de Castilla a la dicha provincia del Rio de la Plata cien casados con sus mujeres e hijos para poblar la dicha provincia y con ellos llevareis a vuestra muger e hijos (CDI de Ameacuterica y Oceaniacutea 23 119)

En numerosas ocasiones se pone de manifiesto el apoyo de la monarquiacutea a la emigra-cioacuten femenina tantas que difiacutecilmente se podriacutean enumerar todos los casos Lo cierto es que la legislatura vigente favoreciacutea la emigracioacuten y traslado de mujeres con toda una se-

153ESPANtildeOLAS DE ULTRAMAR EN LA HISTORIA Y EN LA LITERATURA

rie de alicientes137 sobre todo si eacutestas estaban casadas pasaje para llevar a las familias franquicia de derecho para los artiacuteculos que portasen consigo favoritismo en cargos destinos y contrataciones a aquellos que pasasen con sus mujeres incluyendo ademaacutes de los castellanos y leoneses a suacutebditos de otras partes de la corona incluso genoveses y portugueses si estos veniacutean acompantildeados de sus consortes (Fernaacutendez Duro 15-16)

Incluso se llegoacute a imponer penas a aquellos hombres casados que no llevasen a sus mujeres con ellos a Indias en el teacutermino de un antildeo El mismo emperador en una ceacutedula otorgada al virrey de la Nueva Espantildea le recomendaba que laquoprocurase persuadir a ca-sarse a los solteros que estuviesen en edad y situacioacuten de hacerloraquo prometieacutendoles que al efectuar el matrimonio seriacutean preferidos en el reparto de indios En la isla de San Juan de Puerto Rico los cargos oficiales y oficios puacuteblicos debiacutean de ser desempentildeados por los casados en primer lugar En Meacutexico ocurrioacute lo mismo con los cargos de corregido-res (Konetzke laquoemigracioacutenraquo 140-41) Felipe II al igual que sus antecesores y sucesores reiteraraacute y justificaraacute los beneficios de los que seraacuten acreedores aquellos que tengan allaacute a sus mujeres laquoque los que han servido en los descubrimientos de las dichas Indias y tambieacuten los que ayudan a la poblacioacuten dellas que tienen allaacute sus mugeres sean preferi-dos en los aprouechamientos qualesquierraquo mandando que despueacutes de los conquistado-res se tuviera en cuenta para la laquoprovisioacuten de los corregimientosraquo a los colonos casados siempre que estuvieran capacitados para dichos cargos (Konetzke laquoemigracioacutenraquo 141)

Las disposiciones en favor del matrimonio son claras ya sea por medio de un favo-ritismo manifiesto como en los casos antes citados o mediante medidas de cohercioacuten para que esta poliacutetica se llevase a cabo Don Sebastiaacuten Ramiacuterez de Fuenleal obispo de Santo Domingo y presidente de la Audiencia de Meacutexico propuso que a aquellos enco-menderos que no estuviesen casados y que no hubiesen tomado parte en la conquista se les quitase los indios concedidos con la obligacioacuten de devolveacuterselos si en el plazo de un antildeo habiacutean contraiacutedo matrimonio (Konetzke laquoemigracioacutenraquo 142-43) Por supuesto hubo excepciones a estas reglas En algunos casos ni la mujer teniacutea especial intereacutes en vivir junto con su marido en las Ameacutericas ni el marido queriacutea ir a buscar a su mujer pasado el plazo de un antildeo En el presente documento y de forma excepcional las auto-ridades reales protegen a los conyuges para que puedan seguir viviendo separados en continentes diferentes

Nuestras justicias de la ysla de Cubagua e otras qualesquier de las nuestras Yndias yslas e tierra firme del mar oceacuteano e a cada uno e qualquier de vos a quieacuten esta mi ceacutedula fuese mostrada por parte de Alonso de Tapia nuestro veedor de la provincia de Paria me ha sido hecha relacioacuten que ha mucho tiempo que reside en esas partes donde nos ha servido en lo que se ha ofrecido e que agora vos otros le apre-miaacuteis a que venga o embiacutee a estos Reinos por su muger lo cual no puede al presente hazer a causa de no ter posibilidad para ello a mi me ha suplicado vos mandase que no le compeliacuteesedes ny apremiaacutesedes a que viniese o enviase por la dicha su muger y dieacutesedes por libres los fiadores que tenyades para que dentro de un antildeo embiariacutea o verniacutea por

137 Reales Ceacutedulas de los antildeos 1502 y 1503 Academia de la Historia Coleccioacuten Muntildeoz tomo 75 fols 209 y 220 citado por Fernaacutendez Duro 15

154 JUAN FRANCISCO MAURA

ella o como la mi merced fuese lo cual visto por los de nuestro consejo juntamente con una peticioacuten presentada por dontildea Mariacutea Gudiel muger del dicho Alonso de Tapia por la cual nos suplica lo mismo que acor-dado que debiacutea mandar esta mi ceacutedula para vos por la qual vos mando que no compelaacuteis ni apremieacuteis al dicho Alonso de Tapia a que venga ni enviacutee a estos reinos por la dicha su muger si no fuere a que la pro-vea de lo que fuere necesario para su mantenimiento y deys por libres quales quier fianzas que sobre ello haya dado e no fagades ende al por alguna manera Firmado en la villa de Valladolid a VII diacuteas del mes de febrero de mil e quinientos e treinta y siete antildeos yo el licenciado Con-de de Samano y sentildealada del cardenal Beltraacuten y Carbajal [Aparte en letra pequentildea] Este diacutea se despachoacute una provisioacuten por la cuaacutel su Mag hizo merced a Alonso de Tapia de la veedoriacutea de la provincia de Paria por muerte de Garciacutea de Aguilar con las clausulas ordinarias y con el mismo salario que teniacutea Aguilar Firmado del emperador y de Beltraacuten y Bernal y Velaacutezquez El Rey (Registro de disposiciones Riacuteo Marantildeoacuten AGI Indiferente General Legajo 416 libro 2 Fols 94v y 95r)

El punto maacutes interesante a destacar de todas estas disposiciones oficiales en cuanto a la emigracioacuten femenina al Nuevo Mundo no es otro que la libertad que se da a la mujer de decidir si quiere o no casada o sin casar trasladarse al nuevo continente no como una imposicioacuten sino como un precepto laquoel espiacuteritu de las disposiciones en el sentido de asegurar la vida marital de los casados significa que la mujer que su marido invita a pa-sar a las Indias puede negarseraquo (Villafantildee 127) Habriacutea que ver las opciones laquorealesraquo ade-maacutes de las legales y econoacutemicas que le quedaban a la mujer si tomaba esta decisioacuten

El saber la libertad de eleccioacuten que estas mujeres teniacutean de antemano antes de aden-trarse en las interminables penalidades y aventuras que los viajes de la navegacioacuten tran-soceaacutenica suponiacutean hace que sus hechos y esfuerzos cobren auacuten maacutes relieve En nume-rosas ocasiones estas mujeres cruzaron el oceacuteano una y maacutes veces sin otro motivo que el de defender los derechos e intereses de los suyos Lo que resulta maacutes valioso de todo esto es que lo hicieran por propia iniciativa arriesgando sus vidas para que se hiciese justicia y para que no les faltase lo necesario a aquellos que estaban en la otra orilla Las autoridades vigentes conocedoras de los vaciacuteos legales existentes en las nuevas colo-nias se apresuraron a poner en vigor aquellas normas que redundaran en el beneficio de los menos favorecidos por las circunstancias La institucioacuten del matrimonio cuya trans-cendencia es fundamental en la vida juriacutedica y social de la mujer tuvo que ser legislada en Ameacuterica con una serie de nuevas disposiciones agregados modificaciones y aclara-ciones Asiacute pues la legislacioacuten de base espantildeola tuvo que sufrir en tierras americanas esta serie de cambios por motivos poliacuteticos y sociales (Villafantildee 126)

Para hacer un sumario de lo dispuesto hasta el siglo XVI en cuanto a la legislacioacuten de las mujeres que teniacutean familia o intereses en Indias merece la pena mencionar que existieron una serie de disposiciones que protegiacutean a las mujeres para que eacutestas no se viesen abandonadas por sus maridos En un epiacutegrafe de la Recopilacioacuten de 1680 (libro VII tiacutetulo 3) se deja ver claramente la preocupacioacuten de las autoridades en este asunto laquoDe los casados en Espantildea e Indias que estaacuten ausentes de sus mujeres y esposasraquo (Vi-llafantildee 126-27)

155ESPANtildeOLAS DE ULTRAMAR EN LA HISTORIA Y EN LA LITERATURA

La lista de disposiciones se hace interminable En los reinados de Fernando el Catoacute-lico Carlos V Felipe II Felipe III o incluso Carlos II la insistencia es constante La ra-zoacuten de esta insistencia seriacutea bastante obvia dado que con un oceacuteano por medio seriacutean muchos los que se aprovechasen de llevar una doble vida marital sin el estricto control y vigilancia de sus mujeres que se encontraban en la peniacutensula La ley XXVII libro IX tiacutetulo XXVI determina laquoDeclaramos por personas prohibidas para embarcarse y pasar a las Indias todos los casados y desposados en estos reinos lsquosino llevaren con ellos sus mujeresrsquo aunque sean virreyes oidores gobernadores o nos fuesen a servir en cual-quier cargo y oficios de Guerra Justicia y Hacienda porque es nuestra voluntad que todos los susodichos lleven a sus mujeresraquo (Villafantildee 127) laquoLos eclesiaacutesticos eran los en-cargados de dar cuenta a los tribunales competentes de aquellos que estando casados permaneciacutean en Indias sin sus mujeres Son reiteradas las disposiciones de Fernando el Catoacutelico en este sentidoraquo138 En 1514 el rey don Fernando ordena en una provisioacuten para la isla Espantildeola laquodoy licencia eacute facultad aacute cualquier persona naturales de estos Reynos para libremente se puedan casar con mujeres naturales de esa dicha ysla sin tener que incurrir por ello en pena algunaraquo (Villafantildee 129)

No se debe olvidar tampoco a aquellas mujeres que decidieron pasar a las laquonuevas tierrasraquo solteras Estas mujeres tambieacuten tuvieron un papel importante en el desarrollo de las nuevas colonias Los organismos espantildeoles del momento como los mandatarios indianos y todos los cronistas no dejaron pasar desapercibida la importancia social de estas mujeres en la poliacutetica de poblamiento laquo[E]s cierto que los pueblos de Indias nuevamente poblados no se tienen por fijos o estables ni permanentes hasta tanto que mujeres espantildeolas entren en ellos y los encomenderos y conquistadores se casen por muchas causas y respetos buenos y saludables que para ello hayraquo (Villafantildee 126-27)

Si la intencioacuten era la de una presencia permanente en las tierras americanas la mujer soltera que pasase a ellas siempre seriacutea un motivo maacutes para el colono o conquistador de continuar en el mismo suelo Se podriacutea empezar una familia si asiacute se quisiese sin tener que pensar en volver a la metroacutepoli ya fuese a disfrutar de los bienes adquiridos o a laquobuscarraquo una esposa El problema aparecioacute cuando se produjo un exceso de mujeres solteras lo que de alguna manera alteroacute la estructura social existente ya que no habiacutea muchas opciones para ellas aparte del matrimonio o el convento

En consideracioacuten a que la experiencia habiacutea demostrado que un exce-sivo nuacutemero de mujeres ejerciacutea perniciosa influencia sobre la moral y las costumbres se suplicaba al rey no otorgase a aquellas tantas auto-rizaciones para emigrar al Peruacute La ciudad de la Plata fundada en 1538 emite en 1577 un informe en el que se expone la urgente necesidad de que se funde un convento de monjas pues en el territorio de las Au-diencias de Los Charcas existiacutea un gran nuacutemero de muchachas que no pudieacutendose casar se hallaban en gran peligro de perderse (Konetzke laquoemigracioacutenraquo 149)

138 Solorzano Pereira Juan de Libro Primero de la Recopilacioacuten de las Ceacutedulas Reales Cartas y Provisiones y Or-denanzas Reales Noticia preliminar de Ricardo Levenne Universidad de Buenos Aires Facultad de Derecho Y Ciencias Sociales Pub del Instituto de Historia del Derecho Argentino Coleccioacuten de Textos y Documentos para la Historia del Derecho Argentino t V Buenos Aires Imp de la Universidad de Buenos Aires 1945 (Li-bro I Ley 10 laquoQue los Espantildeoles puedan casar con Indias y al contrario a su voluntadraquo t2 p 138 citado en Villafantildee 129

156 JUAN FRANCISCO MAURA

Entristece ver coacutemo se manejan las cifras de estas mujeres como si de ganado o de bienes suntuarios se tratase Por otra parte existieron irregularidades como la de pobla-doras espantildeolas que vivieron amancebadas con hombres que ya estaban casados en la peniacutensula Normalmente esto ocurriacutea cuando la estancia del conquistador se prolonga-ba maacutes de lo debido en lugares donde habiacutea pocas espantildeolas Muchas veces nacieron hijos de estas uniones que hicieron auacuten maacutes difiacutecil la situacioacuten para las mujeres que esperaban en Espantildea a un marido que ya no teniacutea ningunas intenciones de volver En los juicios de residencia los documentos acostumbran a citar estos casos ya que era parte de su obligacioacuten castigar las irregularidades extramatrimoniales y salvaguardar las buenas costumbres familiares que con tanto intereacutes se deseaba mantener laquoUn ejemplo nos lo da la isla de Cuba donde en 1532 viven con hombres casados Olalla Hernaacuten-dez Santillana Aranda lsquola Cordobesarsquo Catalina de Leoacuten Catalina Saacutenchez Francisca Hernaacutendez Mayor de Azebedo Juana de Valeros y lsquouna mujer que estaba en casa de Ayalarsquoraquo (Borges 416)

Estos casos no fueron aislados y mucho menos en Cuba centro neuraacutelgico de todo el movimiento de ida y vuelta entre la metroacutepoli y el Nuevo Mundo Estas ocho acusa-ciones por lo tanto no tienen porqueacute considerarse extraordinarias y menos en el lugar maacutes cosmopolita de las Indias en esos momentos al que llegaban flotas a cada momen-to Al parecer existieron casos parecidos en el Riacuteo de la Plata Peruacute y Nueva Espantildea (Ratcliffe 347) El margen legal para que estas mujeres viviesen como quisiesen estuvo limitado por una moral que veiacutea uacutenicamente en el matrimonio o el convento una salida laquovaacutelidaraquo para que fueran aceptadas socialmente Los hombres en iguales circunstan-cias fueron juzgados por una laquomoralraquo mucho maacutes permisiva

La mujer y el cuerpo eclesiaacutestico

Pues iquestquieacuten diablos os traiacutedo aquiacute dijo don Quijote siendo hombre de la iglesia iquestQuieacuten sentildeor replicoacute el caiacutedo laquomi desventuraraquo Pues otra mayor os amenaza dijo don Quijote sino me satisfaceacuteis a todo cuanto primero os pregunteacute (Cervantes Don Quijote )

Otro factor a tener en cuenta en un anaacutelisis sobre la presencia de la mujer en el Nuevo Mundo es el que tiene que ver con la institucioacuten maacutes importante de las que llegaron desde Europa la iglesia catoacutelica Sin aacutenimo de criticar a tan compleja institucioacuten res-ponsable de gran parte de los aconteceres en el Nuevo Mundo vale la pena analizar algunas singularidades Muchos de sus miembros fueron grandes ejemplos de valor e inteligencia a la hora de tratar los maacutes variados y escabrosos asuntos con los que se encontraron los cristianos en la otra orilla durante este periacuteodo Se debe resaltar tam-

157ESPANtildeOLAS DE ULTRAMAR EN LA HISTORIA Y EN LA LITERATURA

bieacuten su caraacutecter medieval en la manera de hacer apostolado y de entender y tratar a los potenciales cristianos Si se tienen en cuenta los privilegios y prerrogativas que algunas de las altas jerarquiacuteas eclesiaacutesticas tuvieron no seriacutea superfluo estimar que un respeta-ble porcentaje de la poblacioacuten de origen laquodudosoraquo muy bien podiacutea venir de la misma iglesia Fueron muchas las viacutectimas y muchas las familias divididas por un padre laquoinvi-sibleraquo Gran parte de los hijos o laquosobrinosraquo de estos sacerdotes pasaron a ocupar cargos similares incluyendo los privilegios que estos cargos llevaban consigo como si se trata-se de cualquier otro oficio gremial transmitido generacionalmente regla tan comuacuten en la Europa medieval Todaviacutea a finales del siglo XIII en Espantildea los derechos de los hijos y nietos de los sacerdotes estaban protegidos por la ley sin que hubiesen podido ser erradicados por las reformas gregorianas (Ratcliffe 347)139

Las letras espantildeolas ya se haciacutean eco de estos lances amorosos entre representantes de la Iglesia y ciertas damas del lugar desde los tiempos del poeta riojano Gonzalo de Berceo En su obra maacutes conocida Los milagros de Nuestra Sentildeora Berceo describe con un realismo ingenuo y sencillo relatos de humor y de humanismo sobre aquellos hombres de carne y hueso que eran perdonados por la intercesioacuten de la Virgen Mariacutea Juan Ruiz por su lado haraacute de su Libro de buen amor la obra maacutes representativa en este sentido Seriacutea prolijo recordar la actuacioacuten de la Iglesia durante diversos periacuteodos de la Edad Media no soacutelo en Espantildea sino en toda Europa En la Espantildea musulmana del siglo XII concretamente en Sevilla el comportamiento de los representantes de la iglesia cristia-na (mozaacuterabe) en territorio islaacutemico es duramente criticado por el sevillano Ibn Abdun Este precioso documento muestra el estricto control y falta de confianza que existiacutea sobre la mujer prohibieacutendolas que entrasen en las laquoabominablesraquo iglesias cristianas

porque los cleacuterigos [cristianos] son libertinos fornicadores y sodomi-tas Asimismo debe prohibirse a las mujeres francas que entren en la iglesia maacutes que en diacuteas de funcioacuten o fiesta porque alliacute comen beben y fornican con los cleacuterigos y no hay uno de ellos que no tenga dos o maacutes de estas mujeres con que acostarse Han tomado esta costumbre por haber declarado iliacutecito lo liacutecito y viceversa Convendriacutea pues mandar a los cleacuterigos que se casasen como ocurre en Oriente y que si quie-ren lo hagan (Leacutevi-Provenccedilal 150)

Pese a existir una convivencia paciacutefica durante gran parte de la Edad Media entre los tres credos monoteiacutestas de Espantildea (cristianos musulmanes y judiacuteos) esto no suponiacutea que no existiese desprecio y desconfianza entre estos grupos religiosos Dice Abdun resaltando el peligro que suponiacutea que una mujer entrase en casa de un cleacuterigo cristiano de vida ceacutelibe

No debe tolerarse que haya mujer sea vieja o no en casa de un cleacuterigo mientras eacuteste rehuacutese casarse Obliacutegueseles ademaacutes a circuncidarse co-mo les obligoacute al-Mutadid pues si a lo que dicen siguen el ejemplo de Jesuacutes (iexclDios les bendiga y salve) Jesuacutes se circuncidoacute y precisamente ellos que han abandonado esta praacutectica tienen una fiesta que celebran solemnemente el diacutea de su circuncisioacuten (Leacutevi-Provenccedilal 150-151)

139 Valdriacutea la pena ver si han cambiado mucho las cosas desde hace quinientos antildeos a esta parte o si in-cluso la iglesia moderna ha retrocedido en tolerancia en cuanto a las relaciones sexuales de los representantes de la Iglesia

158 JUAN FRANCISCO MAURA

El historiador argentino Germaacuten Arciniegas recoge un pasaje ilustrativo de lo men-cionado anteriormente pero trasladado al ambiente de la colonia diciendo que incluso en poblaciones pequentildeas como Santa Fe con poco maacutes de un convento y una ermita la fragilidad de la carne enredaba a frailes soldados y virreyes por igual laquoEl buen So-liacutes que murioacute en olor de santidad con la cabeza reclinada sobre un par de ladrillos y en saya de franciscano cruzaba en las noches el solar de su palacio para ir a besar a la Marichuelaraquo (118-19)

Arciniegas recoge tambieacuten un suceso aparecido en el diario de Lima en 1667 que no tuvo que ser extraordinario durante los primeros antildeos de la colonia laquoEl fraile carmelita mdashGrande hereje y siendo sacerdote deciacutea misa gran perro lujurioso deshonesto que relatando sus maldades dijo que en cierta ciudad habiacutea conocido carnalmente a maacutes de trescientas y sesenta mujeres y en un convento de monjas habiacutea cometido muchos sacrilegios Este lo trujeron preso de Buenos Aires por Chileraquo (119)

Las controversias de la iglesia moderna sobre las relaciones que los eclesiaacutesticos de-ben tener con el sexo femenino parece que no han encontrado todaviacutea respuesta Sigue existiendo miedo y recelo a que la mujer comparta no soacutelo poder en la jerarquiacutea de la iglesiacutea sino en la vida privada de los miembros de la institucioacuten En la Nueva Espantildea el primer obispo de Meacutexico Juan de Zumaacuterraga viendo en la mujer un ser de tentacioacuten irresistible prohibioacute terminantemente la presencia de eacutestas en su casa Ni siquiera para su limpieza y aseo El franciscano Juan de Torquemada se refiere a este comportamien-to como una de las virtudes del popular obispo

Fue este benditiacutesimo prelado muy amigo de la virtud y de virtuosos y aceacuterrimo reprehendedor de vicios y viciosos y tan enemigo de la ociosidad que no permitiriacutea que alguno de su casa estuviese ocioso fue amiciacutesimo de la limpieza por lo cual jamaacutes consintioacute que mujer alguna entrase en su casa aunque fuese necesaria al servicio de ella ni nunca consintioacute que por alguna ocasioacuten subiese mujer a lo alto y aposentos de ella antes lo teniacutea todo cerrado como un monasterio porque sabiacutea (como quien tambieacuten sabiacutea) que la ocasioacuten suele derribar los maacutes fuertes y robustos corazones (450 lib 20 cap 31)

No fueron uacutenicamente miembros de la iglesia catoacutelica los que valoraron la lucha con-tra la tentacioacuten siguiendo al pie de la letra el crudeliacutesimo refraacuten laquoentre santa y santo pared de cal y cantoraquo Se tienen algunas noticias de la vida social de los primeros tiem-pos de la colonia En estos documentos se puede observar coacutemo no distaban mucho las oacuterdenes que se dictaban en la metroacutepoli y las que se llevaban a cabo en la Nueva Espantildea La vida social tanto de damas como de algunos miembros de la iglesia de las colonias era maacutes laquorelajadaraquo de lo que las normas permitiacutean Gracias a la informacioacuten ofrecida por Manuel Romero de Terreros disponemos de los nombres de las primeras virreinas

Las esposas de los primeros cinco Virreyes Don Antonio de Mendoza Don Luis de Velasco Don Gastoacuten de Peralta Don Martiacuten Enriacutequez de Almanza y Don Lorenzo Suaacuterez de Mendoza Conde de la Coruntildea fueron respectivamente Dontildea Caterina de Vargas Dontildea Ana de Cas-tilla y Mendoza hija de Don Diego de Castilla Sentildeor de Gor y Caba-

159ESPANtildeOLAS DE ULTRAMAR EN LA HISTORIA Y EN LA LITERATURA

llerizo de Carlos V Dontildea Leonor de Vieo Dontildea Mariacutea Manrique hija del Marqueacutes de Aguilar y Dontildea Catalina de la Cerda hija del segundo Duque de Medinaceli (Romero 2)

Existen noticias concretas de la seacuteptima virreina de la Nueva Espantildea (1586) dontildea Blanca de Velasco marquesa de Villamanrique En ellas destaca lo anteriormente men-cionado sobre la falta de tolerancia existente en aquellos tiempos difiacutecilmente com-prensible si no fuera por fragmentos esporaacutedicos conservados sobre la vida colonial en la Nueva Espantildea En la siguiente Relacioacuten hecha por autores anoacutenimos sobre la visita que hizo Fray Alonso Ponce Comisario General de la Orden Seraacutefica a las provincias de la Nueva Espantildea se mencionan las eneacutergicas medidas que con los miembros de su orden en su opinioacuten de moral laquomuy relajadaraquo tomoacute este religioso Tambieacuten aparecen mencionadas sus relaciones con la Virreina

Captoacutese ademaacutes la enemistad del gobernante y de la Virreina Dontildea Blanca de Velasco hija del cuarto Conde de Nieva sentildeora seguacuten pare-ce de conducta ligera y caraacutecter maacutes que dominante laquoPor este mismo tiempo (septiembre de 1586) fueron el Virey y la Vireyna a holgarse y recrearse en la cibdad de Xochimilco Posoacute con toda su casa dentro de nuestro convento en un dormitorio deacutel y detuacutevose alliacute siete u ocho diacuteas en que los indios les hicieron grandes fiestas aunque les costaron caras porque en una dellas murieron dos o tres dellos con un tiro que se disparoacute y reventoacute y al principal indio de aquella cibdad hirieron muy malraquo (Romero 3-4)

A pesar del riacutegido control eclesiaacutestico y civil que habiacutea en la Nueva Espantildea existieron tambieacuten pareacutentesis en los que incluso miembros de la iglesia y mujeres mdashhumanos al fin y al cabomdash pudieron disfrutar de algunos momentos de regocijo y alegriacutea Con-tinuando con la cita anterior el mismo autor se queja del laquoexcesoraquo de libertad en los frailes que se suponiacutea que teniacutean que profesar una extremada pobreza y no digamos castidad En primer lugar se describen pormenorizadamente la abundancia en el tipo y cantidad de comida de toda clase dulces y vino que se consumieron con largueza y generosidad durante aquellas fiestas Pero lo que maacutes indigna al autor (o autores) fue que llegasen a entrar mujeres en el convento

y aunque todo esto es malo delante de Dios y delante de los hom-bres lo que maacutes mal parecioacute y de que todo el mundo tuvo que mur-murar fueacute la demasiada libertad rotura y disolucioacuten que hubo en en-trar y estar muy de propoacutesito mujeres no soacutelo la Vireyna y las suyas sino otras muchas dentro del dicho convento y andar por las celdas como si fuese cosa profana y como si no hubiera breve apostoacutelico que soacute graves penas y censuras prohibe estas entradas y como si a los frai-les no los comprendiera el dicho breve por admitirlas y no estuviera asiacute declarado y mandado por nuestros estatutos generales de Toledo (Romero 4-5)

La preocupacioacuten por las laquotentaciones de la carneraquo fuera del matrimonio siempre es-tuvo en la mente de los religiosos espantildeoles asiacute como de otras nacionalidades y reli-

160 JUAN FRANCISCO MAURA

giones que intentaban vanamente erradicar algo tan intriacutenseco al ser humano como a cualquier otra especie animal Esta preocupacioacuten se acentuoacute mucho maacutes en el Nuevo Mundo donde muchas sociedades tribales no veiacutean a la mujer como parte integrante de su propiedad privada La razoacuten es obviamente socioloacutegica y ha existido desde el principio de los tiempos en las civilizaciones maacutes primitivas laquoNo desearaacutes a la mujer del proacutejimoraquo El quebrantar este precepto equivaldriacutea a desestabilizar desde su base a la sociedad judeo-cristiana fundamentada en la familia Las penas aplicadas en estas transgresiones seraacuten lo suficientemente severas como para marginar socialmente mdashen el mejor de los casosmdash a aquellos que las pongan en praacutectica Siendo la mujer la encar-gada por la naturaleza de trasmitir la descendencia de la especie su libertad sexual se veraacute limitada por el peligro de quedar embarazada cada vez que ignore tal elemental precepto140

Primeras escritoras del Nuevo Mundo

Contra cuerdos y contra locos estaacute obligado cualquier caballero andante a volver por la honra de las mujeres cualesquiera que sean Cuanto maacutes por las reinas de tan alta guisa y pro como fue la reina Madaacutesima a quien yo tengo particular aficioacuten por sus buenas partes porque fuera de haber sido fermosa ademaacutes fue muy prudente y muy sufrida en sus calamidades que las tuvo muchas (Cervantes Don Quijote)

Fueron varias las escritoras que durante los siglos XVI y XVII tuvieron una relacioacuten di-recta o indirecta con el Nuevo Mundo Muchas de ellas eligieron la vida monaacutestica mdashen algunos casos como refugio huyendo de sus maridosmdash uacutenica salida en una estructura social en donde no eran muchas las opciones especialmente en una eacutepoca donde el fac-tor religioso pesaba casi tanto como el econoacutemico pero sobre todo para dedicarse a una vida espiritual difiacutecilmente alcanzable en otras circunstancias Mariloacute Vigil apunta que las monjas que lo eran por su propia voluntad ademaacutes de tener inquietudes religiosas tambieacuten las teniacutean intelectuales como es el caso de la escritora miacutestica espantildeola Santa Teresa de Jesuacutes (1515-1582) que ademaacutes de tener una de las vidas maacutes interesantes que se conozcan supo sacar tiempo para escribir las maacutes bellas manifestaciones de la poesiacutea liacuterica y sobre todo de la prosa castellana (Vigil 237-38) Cada una de estas mujeres de-dicadas a la vida literaria y espiritual de su tiempo se merece muchiacutesimo maacutes espacio del que se les pueda ofrecer en estas pocas liacuteneas No obstante con estas pasajeras men-

140 Aunque afortunadamente las cosas han cambiado para la mujer no se debe dejar de mencionar la can-tidad de abusos sexuales de la que es viacutectima en la sociedad moderna

161ESPANtildeOLAS DE ULTRAMAR EN LA HISTORIA Y EN LA LITERATURA

ciones se espera al menos incluirlas y poder despertar el suficiente intereacutes para que sus vidas y sus obras no sigan sumergidas en las simas del olvido Para que estas mujeres de la iglesia pudiesen satisfacer su curiosidad cognoscitiva era necesario romper todas aquellas barreras que supusiesen un estorbo o una restriccioacuten a la hora de investigar consultar o hablar con cualquier persona religiosa de cualquier orden o secular ya fue-se obispo o cleacuterigo Las posiciones intelectuales entre las diferentes oacuterdenes religiosas fueron muy dispares como bien es sabido No eran iguales los planteamientos teoloacute-gicos de los dominicos que los de los franciscanos o los de los carmelitas que los de los agustinos o jesuitas Era necesario por lo tanto tener acceso a estas fuentes de informa-cioacuten para poder constrastar las diferencias y hacer valoraciones propias (Vigil 237-38) El escritor espantildeol Caro Baroja destaca el caraacutecter enciclopeacutedico del catolicismo donde se han integrado corrientes y posturas muy dispares que a traveacutes del diaacutelogo daban cierto espacio al creyente con maacutes curiosidad intelectual para que este pudiese compa-rar y valorar las diferentes opciones que se le ofreciacutean (Vigil 237-38)

Varias de estas mujeres intelectuales fueron hijas de conquistadores que aunque na-cidas en suelo americano seguiacutean expresaacutendose en la lengua de sus padres con no me-nos fuerza que sus contemporaacuteneas peninsulares Es cierto que existieron numerosas escritoras en el Nuevo Mundo durante el siglo XVIII algunas dedicadas incluso al estudio de las matemaacuteticas como la mexicana Dontildea Francisca Gonzaga y Castillo Pero para limitar el presente trabajo a los siglos XVI y XVII uacutenicamente se incluiraacuten ejemplos de estos dos siglos

La peruana Josefa de Alarcoacuten publicoacute en 1648 unas liras dedicadas a las Exequias del Priacutencipe Baltasar Carlos

Cifro en capilla breveEl tribunal de la Magestad maacutes graveEn fe de lo que debeA Carlos que en dos mundos no cabe141

El caso de Sor Jeroacutenima de la Asuncioacuten es muy interesante una mujer que tuvo la oportunidad de viajar a Meacutexico y posteriormente a las Filipinas para cumplir con las mi-siones que le habiacutean sido encomendadas por su orden Nacida en Toledo en 1555 en el seno de una noble y acaudalada familia estuvo destinada a recorrer el mundo ofrecien-do sus servicios a todos los necesitados distinguieacutendose por su ardiente caridad laquovien-do que los galeotes eran tratados con dureza excesiva sobre todo cuando los llevaban de un pueblo a otro procuroacute aliviar las penas de aquellos desgraciados y lo consiguioacute en parteraquo (Serrano y Sanz 268 65) Hija del licenciado e ilustre jurista Pedro Garciacutea Yaacute-ntildeez y de dontildea Catalina de la Fuente ingresoacute contra su voluntad en el monasterio de las Clarisas de Santa Isabel de los Reyes (Toledo) el 5 de agosto de 1570 (Trevintildeo 46) hay que decir que eacutesta no seraacute la uacutenica voluntad contra la que tuvo que luchar

Sor Jeroacutenima se embarcoacute para Meacutexico y de alliacute partioacute hacia Manila junto con siete compantildeeras en el famoso laquoGaleoacuten de Manilaraquo que saliacutea anualmente del puerto mexi-cano de Acapulco Su viaje a las Filipinas duroacute un antildeo y tres meses desde su salida de Espantildea tiempo en el que demostroacute un gran valor y determinacioacuten por el soacutelo hecho de

141 Manuel Serrano y Sanz Apuntes para una biblioteca de escritoras espantildeolas desde el antildeo 1401 al 1833 vols 268 269 270 271 Biblioteca de Autores Espantildeoles (Madrid Atlas 1975) 268 19

162 JUAN FRANCISCO MAURA

embarcarse en tan precarias naves Fue la primera misionera de Oceaniacutea muriendo en Manila en 1621 Alliacute fundoacute el monasterio de Santa Clara que perviviriacutea hasta ser bom-bardeado en la Segunda Guerra Mundial (Trevintildeo 47) Escribioacute su Vida donde trata de la fundacioacuten del convento y de todas las tribulaciones mdashllegoacute a ser excomulgadamdash y satisfacciones que una vida dedicada a una causa justa proporciona Tambieacuten escribioacute una obra de caraacutecter filosoacutefico-teoloacutegico titulada Carta de marear en el mar del mundo nombre alegoacuterico que da cuenta de la enorme distancia recorrida a traveacutes del laquomar del espiacuterituraquo por sor Jeroacutenima He aquiacute algunos de sus versos de caraacutecter religioso

Vuestra soy para vos naciacuteiquestQueacute mandaacuteis hacer de miacute Inaccesible grandezaEterna Sabiduriacuteay bondad del alma miacuteaDios un ser poder y Altezamirad la suma pobrezade eacutesta que se ofrece aquiacuteiquestQueacute mandaacuteis hacer de miacute (Serrano y Sanz 268 66)

Ya en Meacutexico tenemos otro ejemplo de una mujer dedicada por completo a Dios y al estudio y composicioacuten de obras de caraacutecter teoloacutegico Dontildea Ana Mariacutea del Costa-do de Cristo nacida en la ciudad de Tlaxcala hacia el antildeo 1650 Tomoacute la orden de San Francisco para consagrarse a las labores de su orden y a la escritura Se dice que con los escritos de Dontildea Ana Mariacutea se podriacutean formar veinte tomos (Serrano y Sanz 268 282) Estas son algunas de sus obras Vida y muerte de Jesucristo Nuestro Sentildeor Vida del Seraacutefico Padre San Francisco de Asiacutes Vida de la iacutenclita Virgen Santa Clara Vida del sutiliacutesimo doctor Juan Duns Escoto

Pero no todas las monjas tuvieron vidas tan dedicadas al estudio y la oracioacuten Loacutegica-mente entre un nuacutemero tan grande de mujeres existioacute de todo y seriacutea un error pensar que todos los conventos femeninos estaban integrados por laquocaacutendidas palomasraquo Una monja en el siglo XVI y XVII teniacutea mucha maacutes fuerza que una mujer ordinaria ya que actuaban en grupo y la entrada a los recintos donde viviacutean estaba permitida solo a mu-jeres Esta situacioacuten las haciacutea mucho maacutes fuertes a todos los niveles que una mujer sola protegida uacutenicamente por su familia laquoLas monjas durante los siglos XVI y XVII lucharon por eludir la clausura y por zafarse del control que los frailes de las secciones masculi-nas de sus congregaciones ejerciacutean sobre ellasraquo (Vigil 230) Soacutelo un antildeo maacutes tarde que dontildea Ana Mariacutea del Costado de Cristo en 1651 y a 12 leguas de Meacutexico nacioacute la sin par Sor Juana Ineacutes de la Cruz hija de don Pedro Manuel de Asbaje natural de Vergara (Vizcaya) y de Dontildea Isabel Ramiacuterez de Santillana hija de espantildeoles (Serrano y Sanz 268 289) Por ser sin lugar a dudas la poeta maacutes importante de su tiempo y probable-mente la maacutes conocida del mundo hispano no profundizaremos en ella Su obra es un canto a la inteligencia y el exponente maacutes destacado de la literatura barroca americana tanto en prosa como en verso Destacareacute simplemente que Sor Juana Ineacutes pese a vivir en un sociedad donde no eran excesivas las libertades concedidas a las mujeres tuvo el caraacutecter y la determinacioacuten de dejarnos las maacutes bellas poesiacuteas amorosas que si bien estuvieron enmarcadas en un ambiente religioso como era de esperar por su condicioacuten

163ESPANtildeOLAS DE ULTRAMAR EN LA HISTORIA Y EN LA LITERATURA

pudieron transcender como unas de las maacutes bellas manifestaciones literarias que hoy en diacutea se conservan Fue su agudeza mental sensibilidad y cultura tal que no fueron suficientes los soacutelidos muros del convento para contener el genio de tan extraordinaria mujer Recordemos sus conocidiacutesimos versos en defensa de las mujeres

Hombres necios que acusaacuteisa la mujer sin razoacutensin ver que sois la ocasioacutende lo mismo que culpaacuteis142

Las metaacuteforas y la delicadeza que emplea en rebatir a su obispo en su laquoRespuesta a sor Filotea de la Cruzraquo no son solamente el epiacutetome del feminismo de su tiempo sino una de las maacutes brillantes manifestaciones del barroco hispano Poesiacutea teatro ensayo y un conocimiento extraordinario de las ciencias claacutesicas de su tiempo hacen de esta mujer un ejemplo extraordinario de las letras universales Ya son cientos los artiacuteculos y libros que se han escrito sobre Sor Juana y no dejan de aparecer tesis doctorales sobre los maacutes diversos temas conectados con la citada autora143 Como nos dice Stephanie Merrim en su documentada obra Early Modern Womenrsquos Writing and Sor Juana Ineacutes de la Cruz

She wrote and published on secular themes as atypical for a nun as human love Her remarkably extensive writings essayed and reenacted most of the (male) poetic dramatic theological and even philosophi-cal discourses of her times in the metropolis making her works a com-pendium of baroque culture in its diversity and syncretism Sor Juana self-creation as a learned women effectively toppled many of the walls in which she was materially enclosed and positioned her within the dynamic world of early modern European culture (xii)

No se debe dejar de mencionar a otras escritoras novohispanas de la eacutepoca que aun-que no fueron tan proliacuteficas y relevantes como Juana Ineacutes de la Cruz dejaron testimo-nio de algunos acontecimientos que tienen intereacutes socioloacutegico o testimonial Este es el caso de Dontildea Mariacutea Estrada Medinilla de igual nombre y apellido que la mujer que acompantildeoacute a las tropas de Corteacutes en su primera entrada a Meacutexico Natural de Meacutexico publicoacute toda su obra a mediados del siglo XVII concentraacutendose principalmente en la lle-gada del Marqueacutes de Villena virrey y capitaacuten general de la Nueva Espantildea a la ciudad de Meacutexico en el antildeo 1640 Escrita en octavas reales la obra trata de las fiestas de toros y cantildeas con que se obsequioacute al citado virrey Fue impresa en Meacutexico en 1641 (Serrano y Sanz 269 402)

Mucho maacutes importante para el presente libro es Dontildea Isabel de Guevara que escribioacute en 1556 la carta en que se expone la ayuda que ofrecieron las mujeres en el descubri-miento y conquista del Riacuteo de la Plata No cabe la menor duda de que esta carta es uno

142 Para una mejor comprensioacuten del caraacutecter de esta excepcional mujer veacutease entre los numeros trabajos publicados Fredo Arias de la Canal Intento de psicoanaacutelisis de Juana Ineacutes y otros ensayos sorjuanistas (Meacutexico Frente de Afirmacioacuten Hispanista 1972) 47

143 Veacuteanse entre otros trabajos Octavio Paz Sor Juana Ineacutes de la Cruz o las trampas de la fe Georgina Sabat de Rivers En busca de Sor Juana Margo Glantz Sor Juana la comparacioacuten y la hipeacuterbole Gerard C Flynn Sor Juana Ineacutes de la Cruz Stephanie Merrim Feminist perspectives on Sor Juana Ineacutes de la Cruz Pamela Kirk Sor Juana Ineacutes de la Cruz religion art and feminism

164 JUAN FRANCISCO MAURA

de los documentos maacutes importantes con que contamos en relacioacuten a la aportacioacuten fe-menina en el proceso de la conquista de Ameacuterica Su importancia viene dada por varios factores Primero es uno de los primeros testimonios mdashsi no el primeromdash en donde se expone abiertamente la indispensable colaboracioacuten de las mujeres en el descubrimien-to y conquista de tierras en el Nuevo Mundo laquoQue si no fuera por ellas todos fueran acabadosraquo En segundo lugar la informacioacuten vertida en estas liacuteneas presenta en parte la manera de pensar de una mujer espantildeola en tales circunstancias Extraordinario tes-timonio de primera mano que nos da una idea de lo que significoacute en muchos casos el valor y entrega constantes de muchas de estas mujeres que auacuten a riesgo de perder sus vidas no dudaron en luchar al lado de los hombres por una causa que consideraban laquocomuacutenraquo

La relevancia histoacuterica de dicha carta hace que merezca ser transcrita en su totali-dad

Carta de dontildea Isabel de Guevara a la princesa gobernadora dontildea Juana exponiendo los trabajos hechos en el descubrimiento y conquista del Riacuteo de la Plata por las mujeres para ayudar a los hombres y pidiendo repartimiento

para su marido Asuncioacuten 2 de julio de 1556

Muy alta y muy poderosa sentildeora

A esta provincia del Riacuteo de la Plata con el primer gobernador de ella don Pedro de Mendoza hemos venido ciertas mujeres entre las cuales ha querido mi ventura que fuese yo la una y como la armada llegase al puerto de Buenos Aires con mil quinientos hombres y les faltase el bastimento fue tamantildea el hambre que a cabo de tres meses murie-ran los mil esta hambre fue tamantildea que ni la de Jerusalem se le puede igualar ni con otra ninguna se puede comparar Vinieron los hombres en tanta flaqueza que todos los trabajos cargaban de las pobres mu-jeres asiacute en lavarles las ropas como en curarles hacerles de comer lo poco que teniacutean limpiarlos hacer centinela rondar los fuegos armar las ballestas cuando algunas veces los indios les veniacutean a dar guerra hasta cometer a poner fuego en los versos y a levantar los soldados los que estaban para ello dar arma por el campo a voces sargentean-do y poniendo en orden los soldados porque en este tiempo como las mujeres nos sustentamos con poca comida no habiacuteamos caiacutedo en tanta flaqueza como los hombres Bien creeraacute V A que fue tanta la so-licitud que tuvieron que si no fuera por ellas todos fueran acabados y si no fuera por la honra de los hombres muchas maacutes cosas escribiera con verdad y los diera a ellos por testigos Esta relacioacuten bien creo que la escribiraacuten a V A maacutes largamente y por eso cesareacute Pasada esta tan peligrosa turbunada determinaron subir el riacuteo arriba asiacute flacos como estaban y en entrada de invierno en dos bergantines los pocos que quedaron vivos y las fatigadas mujeres los curaban y los miraban y les guisaban la comida trayendo la lentildea a cuestas fuera del naviacuteo y animaacutendolos con palabras varoniles que no se dejasen morir que presto dariacutean en tierra de comida metieacutendolos a cuestas en los

165ESPANtildeOLAS DE ULTRAMAR EN LA HISTORIA Y EN LA LITERATURA

bergantines con tanto amor como si fueran sus propios hijos Y como llegamos a una generacioacuten de indios que se llaman tinbues sentildeores de mucho pescado de nuevo los serviacuteamos en buscarles diversos modos de guisados porque no les diese en rostro el pescado a causa de que lo comiacutean sin pan y estaban muy flacos Despueacutes determinaron subir el Paranaacute arriba en demanda de bastimento en el cual viaje pasaron tanto trabajo las desdichadas mujeres milagrosamente quiso Dios que viviesen por ver que en ellas estaba la vida de ellos porque todos los servicios del naviacuteo los tomaban ellas tan a pechos que se teniacutea por afrentada la que menos haciacutea que otra sirviendo de marear la vela y gobernar el naviacuteo y sondar de proa y tomar el remo al soldado que no podiacutea bogar y escotar144 el naviacuteo y poniendo por delante a los soldados que no se desanimasen que para los hombres eran los trabajos verdad es que a estas cosas ellas no eran apremiadas ni las haciacutean de obliga-cioacuten ni las obligaba si solamente la caridad Asiacute llegaron a esta ciudad de la Asuncioacuten que aunque ahora estaacute muy feacutertil de bastimentos en-tonces estaba de ellos muy necesitada que fue necesario que las muje-res volviesen de nuevo a sus trabajos haciendo rosas con sus propias manos rosando y carpiendo y sembrando y recogiendo el bastimento sin ayuda de nadie hasta tanto que los soldados guarecieron de sus fla-quezas y comenzaron a sentildeorear la tierra y adquirir indios e indias de su servicio hasta ponerse en el estado en que ahora estaacute la tierra He querido escribir y traer a la memoria de V A para hacerle saber la ingratitud que conmigo se ha usado en esta tierra porque al presente se repartioacute por la mayor parte de los que hay en ella asiacute de los anti-guos como de los modernos sin que de miacute y de mis trabajos se tuviese ninguna memoria y me dejaron de fuera sin me dar indio ni ninguacuten geacutenero de servicio Mucho me quisiera hallar libre para me ir a presen-tar delante de VA con los servicios que a SM he hecho y los agravios que ahora se me hacen mas no estaacute en mi mano porque estoy casada con un caballero de Sevilla que se llama Pedro de Esquivel que por servir a SM ha sido causa que mis trabajos quedasen tan olvidados y se me renovasen de nuevo porque tres veces le saqueacute el cuchillo de la garganta como allaacute VA sabraacute A que suplico mande me sea dado mi repartimiento perpetuo y en gratificacioacuten de mis servicios [en el origi-nal del AHN Diversos doc 141 dice ademaacutes mande que sea proveydo mi marido de alguacuten cargo conforme a la calidad de su persona pues el de su parte por sus servicios lo merece] lo merece Nuestro sentildeor acre-ciente su Real vida y estado por muy largos antildeos De esta ciudad de la Asuncioacuten y de julio 2 1556 antildeosServidora de V A que sus Reales manos besa

Dontildea Isabel Guevara

144 Sacar agua de un riacuteo acequia o presa

166 JUAN FRANCISCO MAURA

Sobremdash A la muy alta y muy poderosa sentildeora Princesa dontildea Joana Gobernadora de los reinos de Espantildea etc ndash En su Consejo de Indias (Isabel de Guevara 619-21)

Iroacutenicamente la carta teniacutea que llegar a manos de la desdichada heredera del trono de Castilla e hija de los Reyes Catoacutelicos Juana laquola Locaraquo que habiacutea muerto el antildeo an-terior Son profeacuteticas las palabras de esta mujer no soacutelo porque sus hechos personales quedasen en el olvido sino porque incluso se ha borrado la historia de las mujeres en el Nuevo Mundo negando su presencia Por lo menos Isabel Guevara tuvo acceso a una pluma iquestCuaacutentas seriacutean las que ni siquiera sabriacutean escribir

Otra contemporaacutenea fue dontildea Leonor de Iciz que vivioacute durante la segunda mitad del siglo XVI Interesa sobre todo por los sonetos que escribioacute en elogio de Ercilla soldado que participoacute en la conquista de Chile y que se inmortalizoacute con su obra La Araucana (Serrano y Sanz 269 534) Lo mismo hizo Dontildea Bernarda Lintildeaacuten en 1610 autora de otro soneto en memoria del capitaacuten Gaspar Peacuterez de Villagraacute que participoacute en la conquista de Nuevo Meacutexico (Serrano y Sanz 270 14) Los escritos de estas mujeres tratan de de dos de las eacutepicas maacutes dramaacuteticas de la conquista

En el Peruacute y en pleno siglo XVII aparece otra fundadora de conventos Sor Bernardina de Jesuacutes que ademaacutes fue comparada con Santa Teresa por la semejanza de sus laquocartasraquo con las de la santa de Avila Fue fundadora del convento de Tacunga en Quito maacutes tarde destruiacutedo por un terremoto Dice Serrano y Sanz con respecto a su biografiacutea un tanto legendaria que fue carmelita descalza de Lima y hermana de Dontildea Mariacutea Benavides y Esquivel abuela de D Pedro de Peralta Barnuevo (Serrano y Sanz 269 553) Dicen que esta santa se alimentoacute durante treinta antildeos con laquochochos y caacutescaras de naranja hecho tan raro como increiacuteble Cuando fallecioacute reparaban las monjas en ponerle una vara de azucenas porque habiacutea sido casada y aquellas flores aparecieron milagrosamente sobre el cadaacuteverraquo (Serrano y Sanz 269 553)

Otra limentildea del primer cuarto del siglo XVII con reputacioacuten de santa fue Dontildea Luisa Melgarejo En este caso no se trata de una religiosa de oficio sino de la mujer del doctor Juan de Soto La uacutenica diferencia es que dontildea Luisa al parecer teniacutea laquovisiones y reve-lacionesraquo lo que debioacute poner nervioso a maacutes de un miembro del tribunal del laquoSanto Oficioraquo que consideraron sus escritos laquoculpadosraquo De su papel de laquosantaraquo pasa por lo tanto al de laquoposesaraquo o laquoendemoniadaraquo El inquisidor de Lima Gaitaacuten escribioacute un infor-me donde a traveacutes de la opinioacuten puacuteblica y de otras averiguaciones se deciacutea que dontildea Luisa Melgarejo laquomujer santaraquo sabiacutea cuando las almas de los difuntos saliacutean del Purga-torio El diacutea 14 de noviembre de 1623 se decidioacute tomar posesioacuten de todos los cuadernos en los que habiacutea escrito las experiencias de todos sus laquoarrobos suspensiones extasis y revelacionesraquo Estos cuadernos una vez recogidos presentaron toda una serie de al-teraciones borrones adiciones enmiendas incluso diferente letra por lo que despueacutes de haber sido examinados resultaron culpables145 Excelente imaginacioacuten debioacute tener dontildea Luisa Melgarejo la suficiente al parecer para convencer a algunos miembros de la iglesia de que en sus escritos laquohabiacutea algoraquo que mereciacutea la pena Estas cosas ocurriacutean en Lima uno de los centros culturales maacutes importantes de la vida social y poliacutetica en la Ameacuterica espantildeola Lima a comienzos del siglo XVII seguacuten el empadronamiento llevado

145 Serrano y Sanz 270 47 Veacutease J T Medina Historia del tribunal del Santo Oficio de la Inquisicioacuten de Lima (1569-1820) (Santiago Imprenta Gutemberg 1887) Tomo II 34-41

167ESPANtildeOLAS DE ULTRAMAR EN LA HISTORIA Y EN LA LITERATURA

a cabo en 1614 por el marqueacutes de Montesclaros era una ciudad de 25000 habitantes de los que 11000 eran espantildeoles El nuacutemero de religiosos y religiosas llegaba a 1720 (Pittaluga 77)

Se sabe que en la Isla de Santo Domingo durante el siglo XVI nacioacute o al menos resi-dioacute una poeta de ceacutelebre apellido en los aconteceres del Nuevo Mundo Dontildea Elvira de Mendoza de la que se conserva un manuscrito en la Real Academia de la Historia laquoCantares miacuteos que estaacuteis rebeladosraquo Eugenio de Salazar hace un elogio de ella como poeta en un Soneto a la ilustre Poeta y Sentildeora Dontildea Elvira de Mendoza moradora en la ciudad de Santo Domingo (Serrano y Sanz 270 53)

Nacida en Burgos sobre el antildeo 1590 dontildea Luisa de Padilla merece un lugar aparte dentro del grupo de mujeres escritoras de su eacutepoca Por su estilo faacutecil y castizo su no-vedad de pensamientos y su rica erudicioacuten recibioacute el siguiente comentario de Manuel Serrano y Sanz laquoPocas figuras hay en nuestra historia literaria femenil que puedan compararse a esta eminente prosista acaso la maacutes notable de cuantas florecieron en Es-pantildea durante el siglo XVIIraquo (Serrano y Sanz 270 95-96) Este comentario y comparacioacuten deberiacutea ampliarse para que tambieacuten incluyese a laquola historia literaria varonilraquo

Dontildea Luisa fue defensora de la labor que la Inquisicioacuten estaba realizando en la laquolim-piezaraquo de mujeres laquosoldados del demonioraquo que existieron en algunas provincias espa-ntildeolas en aquel tiempo Muchas de las mujeres que combinaban la magia con los po-deres curativos fueron condenadas no solamente por hombres de la Inquisicioacuten sino tambieacuten por mujeres de todas las clases sociales como es el caso de Luisa de Padilla condesa de Aranda En su obra Elogios de la verdad e invectiva contra la mentira preveniacutea contra aquellos que practicaban artes en contra de la religioacuten cristiana La magiacutea negra seguacuten Padilla era la causante de que muriesen casi tantas personas como otras causas naturales habieacutendose descubierto hasta seis mil brujas en Vizcaya y Guipuzcua con-fesando una mujer de un pueblo pequentildeo haber matado con su laquomagiaraquo a ochocientas personas (Perry 31) Eran estos laquomales de ojoraquo y maldiciones seguacuten la autora las causas de que se secasen los pechos de las madres lactantes que se separasen las parejas casa-das y que abortasen las embarazadas (Perry 31)

Si se tiene en cuenta que dontildea Luisa estuvo emparentada con la maacutes rancia aristocra-cia de su tiempo o lo que es lo mismo con algunos de aquellos que en cierta manera dirigiacutean los destinos de Espantildea en aquella eacutepoca (Duques de Lerma Duque de Uceda Marqueacutes de Cueacutellar Conde de Santa Gadea Marqueacutes de Belmonte por citar algunos) se comprenderaacute mejor su identificacioacuten con una institucioacuten que en teoriacutea velaba por la salvaguarda de los valores laquoeternosraquo de una Espantildea destinada a ser la campeona del ca-tolicismo durante los siglos XVI y XVII El padre de dontildea Luisa fue don Martiacuten de Padilla y Manrique extraordinario militar que proboacute su valor contra enemigos moriscos ingle-ses holandeses piratas berberiscos y el renegado genoveacutes Muley Faxad Fue veterano de la batalla de Lepanto donde apresoacute a cuatro galeras y acompantildeoacute con su escuadra a la reina Dontildea Margarita de Austria cuando vino de Geacutenova en 1598 laquoHabiacutea obtenido a 24 de julio de 1587 el tiacutetulo de Conde de Santa Gadea y en 1596 el de Capitaacuten General de la Armada del mar Oceacuteanoraquo (Serrano y Sanz 27095-96)

Por otra parte tambieacuten se sabe que dontildea Luisa participoacute directamente y desde tem-prana edad en la praacutectica de algunas actividades intelectuales como la historia y la arqueologiacutea a la vez que dedicaba su tiempo a virtudes cristianas como la caridad y el socorro de los necesitados (Serrano y Sanz 270 97) Resulta mucho maacutes faacutecil compren-

168 JUAN FRANCISCO MAURA

der la postura ideoloacutegica de esta gran mujer si tienen en cuenta ademaacutes de los factores antes mencionados otros tantos de caraacutecter biograacutefico concernientes a su educacioacuten y matrimonio

Otra escritora fue la mexicana dontildea Mariacutea Casilda Pozo natural de Temestla (Meacutexi-co) Nacida en el mes de abril de 1682 dejoacute escrita su biografiacutea en 16 cuadernos el ma-nuscrito original se encuentra en la biblioteca del colegio de San Gregorio de Meacutexico Fue su confesor el jesuiacuteta Domingo Quiroga que fue quieacuten la incitoacute a escribir su obra (Serrano y Sanz 270 137) Sor Juana de San Antonio aparece a principios del siglo XVII formando parte de un grupo de religiosas espantildeolas que fueron a Manila por la ruta de Meacutexico Ademaacutes de distinguirse por sus cualidades personales su obra interesa por ofrecer informacioacuten testimonial y costumbrista acerca de la forma de vestir de chinos y japoneses (Serrano y Sanz 270 225)

Otra monja esta vez ecuatoriana fue Gertrudis de San Ildefonso Nacida en 1652 profesoacute su vocacioacuten en el convento de Santa Cruz de Quito dejando escrita su vida por mandato de su confesor el padre Martiacuten de la Cruz el cual hizo una biografiacutea laquoen tres gruesos voluacutemenesraquo Gertrudis de San Ildefonso murioacute en 1709 (Serrano y Sanz 270 300) en olor de santidad

Sor Mariacutea Ana Agueda de San Ignacio nacioacute el 3 de marzo de 1695 en la dioacutecesis de la puebla de los Angeles en un rancho del lugar de Santiago Tecaliacute (Serrano y Sanz 270300) Esta monja mexicana escribioacute varias obras durante su vida conventual a lo largo de la cual desempentildeoacute el cargo de priora por muchos antildeos Entre sus obras todas de caraacutecter piacuteo y de laquoamor divinoraquo escribioacute un curioso y laquocopiosoraquo tratado de la Leche virginal de la Soberana Madre de Dios El padre Fr Juan de Villa Saacutenchez hace el siguiente comentario al respecto laquoen que hablando primero en sentido natural de los beneficios que debemos a Nuestra Sentildeora pasa a tratar en sentido miacutestico y alegoacuterico enten-diendo en la leche la doctrinaraquo (Serrano y Sanz 270301) Mexicana fue tambieacuten Sor Petronila de San Joseacute que ejercioacute como abadesa del Real monasterio de Jesuacutes Mariacutea de la ciudad de Meacutexico Escribioacute Vidas de varias religiosas ejemplares obra que tiene su im-portancia ya que al parecer laquoDe esta obra se sirvioacute D Carlos de Siguumlenza y Goacutengora para escribir su Parayso Occidental (Meacutexico 1684) seguacuten eacutel mismo declara en el proacutelogo diciendo lsquoa quien si hay algo bueno en esta historia se le debe todorsquoraquo (Serrano y Sanz 270 354) Menos conocida fue su compatriota Sor Luisa de Santa Catalina natural de Xacona laquopueblo situado en las inmediaciones de Zamora (Meacutexico)raquo siendo bautizada en 1682 Escribioacute Cartas espirituales a su confesor el P Juan Loacutepez de Aguado (Serrano y Sanz 270 361-62)146

Todos estos escritos la mayoriacutea de ellos ignorados por el gran puacuteblico tienen la im-portancia de darnos una perspectiva diferente En otras palabras ensentildearnos la maacutes refinada sensibilidad de muchas mujeres que permanecieron y en su mayoriacutea siguen permaneciendo a laquooscurasraquo de una eacutepoca tan rica de la literatura espantildeola como fue el Siglo de Oro Este siglo fue tambieacuten en su dimensioacuten literaria y artiacutestica patrimonio de la mujer

146 Para profundizar en muchas de estas escritoras hispano-americanas la consulta de la Biblioteca Hispano-Americana de Beristain de Souza resulta de capital importancia

169ESPANtildeOLAS DE ULTRAMAR EN LA HISTORIA Y EN LA LITERATURA

Sor Nada ardores divinos de una monja adolescente escritos ineacutedi-tos de una recieacuten profesa del siglo XVI147

iexclQueacute encantadores son tus amores hermana miacutea espo-sa iexclQueacute deliciosos son tus amores maacutes que el vino Y el aroma de tus perfumes es mejor que el de los baacutelsamos Miel virgen destilan tus labios esposa miel y leche hay en tu lengua y el perfume de tus vestidos es como aroma de incienso (Cantar de los Cantares 4 10-11)

Sor Nada llamada asiacute por humildad seguacuten dice el Indice de manuscritos de la Biblio-teca Nacional de Madrid es uno de los ejemplos maacutes desconocidos e interesantes que tenemos de la poesiacutea y prosa amoroso-religiosa del siglo XVII Hasta la fecha nunca se habiacutea publicado su obra e incluso hasta el antildeo 1995 para mi sorpresa no habiacutea copias microfilmadas de sus manuscritos en la Biblioteca Nacional Serrano y Sanz en su libro Apuntes para una Biblioteca de Escritoras Espantildeolas hace una escueta y pasajera mencioacuten de esta mujer y de su obra (68-69) siendo eso todo lo que hasta ahora se sabiacutea de ella Sus escritos consisten en los siguientes manuscritos

1 laquoEn queacute consiste un verdadero amor de Diosraquo 9 hojas uacutetiles en 4ordm letra del siglo XVII Biblioteca Nacional de Espantildea Manuscrito 1295926

2 laquoPintura del Propio Amorraquo laquoPintura del propio Amorraquo 10 hojas uacutetiles en 4ordm letra del siglo XVII Biblioteca Nacional de Espantildea Manuscrito 1295927

3 laquoEsplicacioacuten sobre en queacute consiste la paz del Almaraquo laquoQuartillas aacute un Alma que padece soledad interiorraquo 7 hojas uacutetiles en 4ordm letra del siglo XVII Biblioteca Nacio-nal de Espantildea Manuscrito 1295828

En cuanto a su persona soacutelo se nos dice que laquose encubrioacute con este seudoacutenimo laquoSor Nadaraquo Esta monja desconocida de origen hispanoamericano posee toda la frescura e ingenuidad de una joven apasionada metida por vocacioacuten u obligacioacuten a ejercer la profesioacuten maacutes comuacuten para mujeres de cierta clase social de su tiempo En sus liacuteneas podemos encontrar un misticismo simple incluso en algunos momentos infantil pero a su vez lleno de una fuerza y sensualidad interior poco comuacuten en escritos de este geacute-nero que desborda los liacutemites del laquoamor divinoraquo a traveacutes de los diaacutelogos entre el Alma y el Esposo Sor Nada consigue proyectar su amor a Dios maacutes allaacute de una experiencia romaacutentica Su experiencia es sincera y genuinamente miacutestica trascendiendo la imita-cioacuten o la propia creacioacuten poeacutetica ficcionalizada (Hatzfeld 30) Algunos pasajes son de un

147 Veacutease mi artiacuteculo Sor Nada ardores divinos de una monja adolescente escritos ineacuteditos de una monja profesa del siglo XVIIraquo Espeacuteculo Revista de estudios literarios 26 (2004) 1-10 Universidad Complutense de Madrid http wwwucmesinfoespeculonumero26sornadahtml

170 JUAN FRANCISCO MAURA

alto contenido eroacutetico con sustantivos y metaacuteforas que recuerdan la maacutes iacutentima unioacuten amorosa en unos casos y el tierno amor maternal en otros

[T]e miro Jesus mio desnudo a las inclemencias del tiempo y ardien-do en puro fuego de Amor por la salud de las Almas y me ensentildeas a que te ame con todo mi corason y puresa de espiritu No atendiendo ni buscando umanos intereses ni a solisitar consuelos ni regalos espi-rituales que suelen empantildear la puresa del noble corason No mi Jesus amable pues antes me ensentildeaste tu puro Amor que desnudo sean [sic] de encaminar mis passos desde el pesebre asta la cuna en donde te miro tan desnudo como el pesebre y todo Sentildeor por mi Amor (Mss 12959 26 hoja 1 v)

El manuscrito (12959 27) de la mencionada serie de tres contiene algunas correccio-nes quizaacute hechas por el confesor o quizaacute por ella misma cuando se dirige con excesiva familiaridad y arrebatado fervor a su Amado148 He escogido el manuscrito (12959 Caja 28) en primer lugar por ser el ejemplo maacutes representativo de su poesiacutea y prosa En este manuscrito encontramos de forma maacutes directa que alegoacuterica toda la frescura de un diaacutelogo entre Jesuacutes y el alma que raya como diriacutea Cervantes laquoa la llana y sin rodeosraquo (667 lib 2 cap 38) con el doloroso y a veces desesperado deseo de la entrega y la unioacuten final con el Amado La ortografiacutea no ha sido corregida respetaacutendose el texto ori-ginal149 Veamos el siguiente fragmento

Mira que te amo con Amor de padre y con Amor de esposo el mas fino y puro enamorado que no tan solo me presio de darte mi mano sino tambien todo mi cuerpo y sangre para que con mi pan de vida te sustentes y te regales a tus anchuras y que con mi propio espiritu vivas en paz como tu lo deseas y que mis amores sean unico alivio en tus trabajos en esta mortal vida pues si esto es asi y sabes que muero por darte vida dime esposa mia de que te fatigas Dame querida tus bras-sos y dime si me amas como yo te amo (Hoja 4)

148 La antologiacutea de Promis ha procurado insertar entre los textos antoloacutegicos algunos que se refieren a la es-critura de mujeres fundamentalmente de aquellos generados en el interior de los espacios conventuales Estos textos se fundan como laquohistorias de vidasraquo y responden casi siempre a los requerimientos de los confesores de las monjas coloniales En este sentido resulta valiosiacutesima la incorporacioacuten de la llamada Relacioacuten autobiograacute-fica de Sor Ursula Suaacuterez como una muestra significativa de la escritura monjil entendida en esta eacutepoca (como tambieacuten en la tradicioacuten europea medieval) inserta en las denominadas laquolabores de manoraquo de las religiosas ya que el texto escrito por mandato se convertiacutea en una suerte de entramado o tejido linguumliacutestico es decir en un nuevo bordado que la mayor parte de las veces el confesor convertido en censor iba haciendo tachando y enmendando En la antologiacutea Promis agrega un texto de Sor Tadea Garciacutea de la Huerta titulado Relacioacuten de la inundacioacuten que hizo el riacuteo Mapocho de la ciudad de Santiago de Chile en el monasterio de Carmelitas titular de San Rafael el diacutea 16 de junio de 1783 se trata de un poema tipo romance escrito en versos octosilaacutebicos y que da cuenta de lo sucedido ese diacutea en el convento (Resentildea de la literatura del reino de Chile de Joseacute Promis Eddie Morales Pintildea httpwwwupaclpublicaciones2002literatura_promishtm)

149 Son frecuentes las faltas ortograacuteficas Una de ellas es el uso constante del seseo La ausencia de acentua-cioacuten y puntuacioacuten exceptuando alguacuten punto o coma arbitrario no seguido casi nunca de mayuacutescula inicial lo mismo que el uso igualmente aribitrario de la h o de b v r q g j m n x etc No olvidemos de la misma forma la laxitud linguumliacutestica existente en el siglo XVII (no sabemos a queacute parte de eacuteste pertenece el manuscrito) asiacute como la joven edad de la monja

171ESPANtildeOLAS DE ULTRAMAR EN LA HISTORIA Y EN LA LITERATURA

Los versos del presente manuscrito poseen la misma fuerza que tiene su prosa Con una estructura estroacutefica indefinida estaacuten aparentemente corregidos por alguien que tu-vo la oportunidad de conocer personalmente a la autora Muy probablemente se trate del padre al que hace referencia al principio del primer manuscrito laquoMandame el Pd que le declare en que consiste un verdadero amor a Diosraquo a continuacioacuten continuacutea con su caracteriacutestica humildad laquo[O]bedesere y dire lo q Dios me inspire segun mi rudesa y simplisidadraquo (Mss 12959 26) En cuanto a la fuerza pasional de esta joven observamos con cierta tristeza coacutemo aparece sublimada en sus escritos con toda la enegiacutea de una joven mujer llena de intensidad y vida pero encerrada en los liacutemites de un convento Veamos un ejemplo en donde responde el Alma en los siguientes versos

O mi enamorado Jesus O mi dulse y tierno amanteO alegria de los sielos O dulse Jesus amable

(Toda Sentildeor me derrito toda Sentildeor me desagoy quiero vivir por ti ea sentildeor abrasadme) [Tachado en el original]

Toda Sentildeor me derrito toda Sentildeor me desagoy quiero morir por vos ea Sentildeor que ya acabo

Ya tus amores me llaman ya tus perfumes me traencon suspiros y agonias Sentildeor hasta que te alcanse

O mi Jesus amoroso no puedo mas dilatarmeya la pasiensia me falta dulse Jesus abrasadme

(No puedo vivir sin vos no puedo mas dilatarmeya la pasiensia me falta dulse) [Tachado en el original]

No puedo vivir sin vos mi dulse Jesus amablepues me teneis echisada siendo mi esposo y mi Padre

Ay que me abraso Ay que me quemo del Amor deJesus nasareno como no tocan y tantildeen a fuego150

Estos versos llenos de arrebato sublimado conectan con toda la tradicioacuten miacutestica es-pantildeola que se remonta a Ramoacuten Llul y que culmina en el maacutes universal de nuestros

150 En toda la fuerza y simbologiacutea del amor maacutes iacutentimo del maacutes alto y sublime placer de la unioacuten de los amantes tal como lo encontramos en el Cantar de los Cantares y en San Juan de la Cruz Leemos en la Biblia

Ya me he quitado la tuacutenica iquestCoacutemo volver a vestirme Ya me he lavado los pies iquestCoacutemo volver a ensuciarlosMi amado metioacute su mano por el agujero (de la llave) y mis entrantildeas se estremecieron por eacutel Me levanteacute para abrir a mi amado Mis manos destilaron mirra y mis dedos mirra exquisita en el pestillo de la cerradura (5 3-5)

Nos ocurre lo mismo con San Juan de la Cruz en su insuperable poema laquoLlama de amor vivaraquo

iexclOh cauterio suaveiexclOh regalada llagaiexclOh mano blanda iexclOh toque delicadoque a vida eterna sabey toda deuda pagaMatando muerte en vida la has trocado

172 JUAN FRANCISCO MAURA

miacutesticos San Juan de la Cruz Esta tradicioacuten se extiende hasta finales del siglo XVII esto es hasta los finales del Barroco siendo un poco maacutes tardiacuteo en la Ameacuterica espantildeola Sin tener como propoacutesito discutir en el presente trabajo a queacute corriente miacutestica pertenece la obra de Sor Nada es necesario resaltar no obstante el hecho de que estaacute escrito por una mujer y ademaacutes de tierna edad El manuscrito 12959 Caja 26 termina con estas pa-labras laquo[T]odas estas boverias escrivi por entretenimiento siendo resien profesa en la religion Sor Nadaraquo Mas no por la juventud de su autora los escritos dejan de tener lo-gradas metaacuteforas imaacutegenes y siacutembolos sacados de la naturaleza La alegoriacutea de la unioacuten matrimonial poseeacute el fuego liacuterico de la maacutes apasionada de las relaciones amorosas vivi-ficada por perfumes flores insectos animales escarchas nieves o abrojos Por lo tanto aunque la narracioacuten destile cierta ingenuidad no carece por ello de un vocabulario rico con el sabor popular de la poesiacutea de los cancioneros y romances de tradicioacuten renacen-tista No ha sido otra mi intencioacuten que la de rescatar del olvido unos escritos en prosa y en verso llenos de frescura y espontaneidad que nos muestran la pasioacuten con que la joven novicia se laquoentrega en cuerpo y almaraquo a los menesteres de su profesioacuten guiada por un padre espiritual en esos primeros antildeos de formacioacuten Esta ha sido la razoacuten por la que presento a continuacioacuten el citado manuscrito en su totalidad

Sor Nada (Mss 1295928)

laquoEsplicacion sobre en que consiste la paz del AlmaraquolaquoQuartillas a un Alma que padece soledad interiorraquo

[7 hojas utiles en 4ordm letra del siglo XVII]

+

Esplicacion sobre en que consiste la paz del Alma

Pareseme segun mi rudo entender que la verdadera paz del Alma con-siste en una muy pura y buena consiencia en un corason liso y bien intensionado en una verdadera rectitud de espiritu en el qual el Alma procura bolar a Dios sin jamas detenerse a respetos umanos ni reparar en que me diran ni de que me censuraran sino me apresuro a seguir a unos entenderes y pareseres dorados en los quales pretende el mundo engantildear y ensuciar si se puede la puresa de un corason unicamente de Dios y de su Santa ley y se lo conserva cristalino con la divina asis-tencia de la gracia y comprendido de su Amor y temor siguiendo la luz divina de tan amante Sentildeor Dios y ombre verdadero con que este ilustrado corason ni se altera ni se mueve por los disfrasses dorados que ase el mundo y sus moradores mayormente con falssas amistades aunque con ellos muestre buena intension Con la misma grasia y luz de Dios conose el buen corason estos disfrasses que le ase el mundo y se retira de todo con espiritu y valor esto sin la menor alterasion sino que en suma paz se retira a buscar a Dios dentro de su mismo corason

173ESPANtildeOLAS DE ULTRAMAR EN LA HISTORIA Y EN LA LITERATURA

y se abrasa con su pura verdad en la qual se le descubren mil interio-res secretos tan solidos puros y verdaderos que la misma Alma queda abismada y de puro grandes no los puede bien comprender ni esplicar pero estos mismos secretos divinos le sirven de espuelas para no solo correr sino bolar con pies de plumas en seguimiento de su bien ama-do Jesus y como este soberano Sentildeor es tan amante de sus espossas las Almas luego que la ve bolar con pies de plumas la sale al encuen-tro en despoblado campo que se deve de llamar Campo de Amor de Dios y el mismo Sentildeor se viene a las manos por ser Dios que nos ama con Amor infinito de Padre benigno y amoroso con que asiendose en contra deso este divino enamorado en lo interyor de el Alma que le busca con ansias de servirle y amarle y en aquella soledad traban una conversasion amorosa y sensilla como la pluma simple de quien esto escrive

Divino enquentroDios y el Alma en la soledad

O Soberano Principe de la paz dise el Alma tus perfumes me traen a ti bolando porque alla en el mundo y sus valedores me pretendian engantildear y entretenerme con pegaminossas amistades que facilmen-te me pudieran envenenar y matarme apartandome de ti Mi dulse Jesus amable mi Redentor Soberano que con tantas ansias me sales al enquentro como siervo [ciervo] erido de mis Amores los quales tu Amor me ofrese para que con tu mismo Amor te ame y te sirva en paz sin perturbarme ni contristarme ni cansarme de padeser pasando si se ofrese por escarchas nieves espinas ni abrojos ni por otros diverssos trabajos ni piedras de contradision que tu me puedes permitir pues por mas que el mar se levante con sus ferosses olas contra mi ni piedras se me tiren al rostro en todo Sentildeor me quieres con serenidad pasifica sin la menor perturbasion Todo Sentildeor quieres que lo tome con Serenidad de espiritu y asi vengo a ti bolando para que mejor me ensentildees a vivir segun las leyes de tu noble condision que me son muy agradables por mas que el mundo me las despresie por segir sus vanidades y torsidas intensiones con apariensias de bien y con este engantildeo y bien me quie-ro mas a mi que no a mi proximo veo que segun mi pareser se pierden muchas Almas y tambien de aquellos que se depresian y pasan por muy espirituales Con que me paresen pocos los que llegan a padeser con desnudes151 de espiritu por tu purisimo Amor y me parese essas se quedan muy atrasadas en la virtud por el peligro de bolver muy atras el paso de modo que se pueden despentildear y pereser en su misma desgra-sia ya por soberbia o por otras enfermedades que se les pega al corason y asi lo pasan como siegos ignorantes sin advertir en sus peligros

151 La letra en cursiva es miacutea

174 JUAN FRANCISCO MAURA

este aquerdo Sentildeor y otros que tu verdad me ensentildea me ase venir uyendo de las paredes del mundo y me vengo a ti Dios mio bolando con las dos Alas del Amor y temor que tu mismo Amor me ofrese tan de gracia y tan de grado que no se duentildeo mio con que lo responder a tan soberano beneficio y finesa de tus entrantildeas de Amorvengo Sentildeor y esposo mio unicamente a descansar en ti pues los peli-gros del camino me an puesto en mucho sobresalto temiendo el per-derte y sin ti perderme para siempre por una eternidad sin fin pues deseo amado mio ganarme ganandote a ti y vivir en ti aora en vida y despues eternamente y estos cuidados me traen fatigada molida y cansada y no podre tener alivio y descanso sino viendome entre tus brassos aunque sea estando en cruz pues ese es el fin de mis deseos vivir y morir en ti ablame mi cordero manso y ensentildeame a que ver-daderamente te ame como fiel esposa ea mi caro amigo dame la ma-no pues sabes Amor mio que en mi no ay mano sin tu misma mano y asi mi Dios y Sentildeor mi Principe Soberano con umilde rendimiento y deseos de alcansarte te suplico me des la mano y me consueles en estos mis trabajos Deseo Sentildeor vivir en paz y los malos amores de mi Naturaleza flaca no me dejan detentar y no quieren por mi desgrasia atropellar con las leyes de tu Amor ni quisiera perturbar mi corason quando me veo con un torvellino de olas y contratiempos que a menu-do me suelen sercar pero si tu Sentildeor me das la mano nada temo sino que me aseguro y vivire en paz sin que me fatiguen los contratiempos pues mi mano en la tuya y mi espiritu en el tuyo por mas borrascas que me envistan no seran bastantes para rendir mi voluntad a la suya bien si para pronunsiar un fiat que resuene bien atras en tus oidos y que en medio de mis fatigas me ponga a cantar tus divinas misericor-dias hea Sentildeor ya pretendo serrar mis labios por no desir mas bove-rias y deseo Sentildeor oir tus palabras de vida eterna abla Sentildeor que tu sierva oye con atension y cuydado mira mi Dios que se me ase tarde y espero con prisa deseando saborearme y aprovecharme de los ecos de tu Santa dotrina pues todas tus palabras saben a eterna vida callen pues mis sentidos y potensias y todo se ponga en paz pues mi dulse y soberano Sentildeor no se escusara de ablar me aun que en mudo silensio hea mi gran Prinsipe de la paz ablame que tus puros amores me traen perdida por estos asperos montes y mis cortos pasos no te pueden dar alcanse mirame mi Dios a tus pies postrada como un vil gusano y me-nor ormiga de la tierraabla Jesus y dise a su esposa el Alma querida esposa mia que me pides y por que te muestras tan fatigada y mal sufrida no vives como corde-rita del campo buscando de mis pechos el sustancial pasto mi Amor no te sustenta y mi grasia te promete eterna vida pues dime amada de que te fatigas y te muestras mal sufrida mira que te amo con Amor de padre y con Amor de esposo el mas fino y puro enamorado que no tan solo me presio de darte mi mano sino tambien todo mi cuerpo y

175ESPANtildeOLAS DE ULTRAMAR EN LA HISTORIA Y EN LA LITERATURA

sangre para que con mi pan de vida te sustentes y te regales a tus an-churas y que con mi propio espiritu vivas en paz como tu lo deseas y que mis amores sean unico alivio en tus trabajos en esta mortal vida pues si esto es asi y sabes que muero por darte vida dime esposa mia de que te fatigas Dame querida tus brassos y dime si me amas como yo te amoResponde el Alma152 Tu mi Dios sabes si yo te amo pues de mi solo se que mis deseos y ansias buelan a ti mas no alcanso a saber si te amo como tu de-seas ser amado y como desconfio tanto de mi y de mis prosederes falssos temo Dios mio perderme y perderte y asi Sentildeor pues no desechas mis Amores y te muestras tan fino en amarme te pido me ensentildees a vivir segun las leyes de tu pura verdad y fina condisionhija mia dise Dios la prueva de un verdadero Amor consiste en sufrir callar y padeser por mi unico Amor y en todo seguir mis pasos sin ja-mas retroseder por mas fragoso que se muestre el camino pues nunca seran tantas las espinas las escarchas ni las nieves ni los vientos bo-rrascosos que te se ofrescan pasar por mi Amor como los que mi tierno y desinteresado Amor paso por ti y siempre con mis pies descalssos y asi hija y esposa mia muestrate costante en seguir lo perfecto de mis passos pues mi braso fuerte sera en ti y peleara por ti y te sera el todo en tus nesesidades y mi Amor te convertira en dulse y suave lo amargo y molesto a la condision de la carrne

Responde el Alma

O mi enamorado Jesus O mi dulse y tierno amanteO alegria de los sielos O dulse Jesus amable

(Toda Sentildeor me derrito toda Sentildeor me desagoy quiero vivir por ti ea sentildeor abrasadme) [Tachado en el original]

Toda Sentildeor me derrito toda Sentildeor me desagoy quiero morir por vos ea Sentildeor que ya acabo

Ya tus amores me llaman ya tus perfumes me traencon suspiros y agonias Sentildeor asta que te alcanse

O mi Jesus amoroso no puedo mas dilatarmeya la pasiensia me falta dulse Jesus abrasadme

(No puedo vivir sin vos no puedo mas dilatarmeya la pasiensia me falta dulse) [Tachado en el original]

No puedo vivir sin vos mi dulse Jesus amablepues me teneis echisada siendo mi esposo y mi Padre

152 La aparicioacuten de una mayuacutescula al principio de una oracioacuten es algo totalmente arbitrario en este ma-nuscrito dada la libertad ortograacutefica de la autora Como se puede observar en la mayor parte de las veces no es el caso

176 JUAN FRANCISCO MAURA

Ay que me abraso Ay que me quemo del Amor deJesus nasareno como no tocan y tantildeen a fuego

Responde Jesus Hija mia tus simples vozes oygo y aunque resuenan bien a mis oidos pero te deseo mas mansa y pasifica en tus fervores ya sabes que no siempre as de vivir en mantillas ni a los pechos de tu Madre por que es rason que padescas con espiritu fuerte como mu-jer valerosa por que a una esposa del Rey soberano y prinsipe de la paz no le estan bien chiquerias ni fervores de nintildea malcriada y ya es ora que la destete su Madre la Naturaleza y que empesando su nueva vida camine con el favor de mi grasia sigiendo mis passos de eterna vida esto con sus pies descalssos segun mis leyes de Amor puro y desinteresado lo tienen ordenado153 y vivir en paz como lo deje en-cargado a mis apostoles Santos repitiendoles varias vezes Vivir en pas y caridad esto es un vivir en Dios y Dios en el Alma y asi hija mia el Alma que vive en paz vive en mi Como mis cortesanos en el cielo y pues me pides que te ensentildee a vivir segun las leyes de mi condision Repito el desir que te debes mostrar sufrida en todo tiempo y estado sin permitir en tu corason que ni aun los fervores se adelanten con estremos ni ademanes sino atiende y aprende de mi purisima Madre pues siempre la veras si bien lo consideras que mientras vivio en el mundo en todos sus trabajos se mostro firme fuerte costante como piedra diamante Pues mirandome nintildeo entre sus brasos desnudo en el pesebre desnudo y crusificado en los brassos de una cruz En estos y otros passos no se mudo su rostro sino que en suma serenidad y pasifico corason toda se sacrificaba enteramente en los brassos de mi Amor y rendido su corason y voluntad en la de mi eterno Padre por ejemplo te la doy y deseo que aprendas de sus nobles calidades pues te aseguro carisima que las leyes de mi condision y pura verdad todo lo allaras enserrado en el corason de mi purisima Madre sedle fiel y descansaras en paz

+

Quartillas a un alma que padese soledad interior

1Un Alma afligida y tristese ve en un campo desiertay en el su esposo la tieneAtormentada y sedienta

153 Es a traveacutes de estas liacuteneas lo que hace suponer que la autora de este diaacutelogo amoroso entre el Alma y Je-suacutes es novicia esto es laquoque estaacute empesando su nueva vidaraquo En las mismas liacuteneas una vez maacutes se hace alusioacuten al laquodesteteraquo de su vida civil laquoa una esposa del Rey soberano y principe de la paz no le estan bien chiquerias ni fervores de nintildea malcriada y ya es ora que la destete su Madre la naturalesaraquo (fol 5)

177ESPANtildeOLAS DE ULTRAMAR EN LA HISTORIA Y EN LA LITERATURA

2Pendiente se ve en el AyreSolo un hilo la sustentasin tocar el pie en el sueloporque del no tome tierra

3Mirandola esta yto a ytoaquel sol que la atraviesay la enviste con sus rayosmas ella no pestantildeea

4Como sigarra padese y como a tal se atormentabatiendo sus mismas Alasy el corason se atraviesa

5Con penas sustos temoresquando se mira assi mesmasin tener valor en nadaporque es la misma flaquesa

6Pero el Amor de su esposotoda su atension le llevay la pone en un abismopero cubierto en tiniebla

7Desea dar algun bueloy subir con ligeresapero se mira travadacon una fuerte cadena

8Clama suspira y padeseMas del todo se sujetaRindiendo su voluntadA la divina clemencia

9Los enemigos del AlmaCruelmente le asen guerray ella aunque firme y constantelos reselos la atormentan

178 JUAN FRANCISCO MAURA

10de todos modos padeseaunque gosa la asistensiadel divino esposo amadoque en su interior se recrea

11Solo de verla penary con verla tan serenadise resibe mil gustosde su sigarra pequentildea

12Le sabe el mundo a mil yelesy su trato le atormentaviendo en el mil falsedadesque todas saben a tierra

13Para poderse librardeja de correr y buelacon las Alas del Amory el mismo Amor se la lleva

Una vida dedicada a un amor divino un amor que le haraacute llenar un buen nuacutemero de cuartillas dedicadas a tan alta empresa Se desconoce si la vocacioacuten de Sor Nada con-tinuoacute con tanta intensidad el resto de sus diacuteas Ciertamente la vida en el covento no era faacutecil En algunos casos la experiencia era traumaacutetica incluso fatal para algunas de las adolescentes de la Ameacuterica Espantildeola Las reglas del claustro eran severas por varias razones Estas joacutevenes si no teniacutean el permiso de la superiora no podiacutean recibir visitas no podiacutean volver a sus casas su correspondencia era censuraba y no podiacutean salir del periacutemetro conventual Igualmente se levantaban antes del amanecer para oir misa tra-bajaban el resto del diacutea y lo maacutes interesante es que muchas veces esta vida era aceptada por muchas

Page 18: Tercera parte: Mujeres en la vida intelectual - …parnaseo.uv.es/Editorial/Maura/TerceraParte.pdf · La Biblia, por su parte, hace repetidas menciones de la mujer y sobre el comporta-

148 JUAN FRANCISCO MAURA

joyel con todo lo susodicho medio marcoraquo Los citados Antoacuten Bernal y su esposa se dan por pagados de todo lo que se les adeudaba y se obligan a su vez a devolver el joyel al Almirante si este les paga en dinero El 23 de agosto de 1530 siete antildeos despueacutes la virreina canceloacute la anterior obligacioacuten y recuperoacute el mencionado joyel (AHPS Libro del antildeo 1523 Oficio I Escribaniacutea Alonso de la Barrera Folio 1173 Fecha 3 de diciembre) En la misma casa del almirante otra mujer Briolanga Muntildeiz su tiacutea materna se obliga a pagar al mercader genoveacutes Batista Catantildeo 22 ducados de oro laquopor cierto raso que le comproacute y habiacutea de ser pagado en el puerto de Santo Domingoraquo (AHPS Libro del antildeo 1509 Oficio V Libro uacutenico Escribaniacutea Francisco Esquibel Folio Primer tercio del lega-jo Fecha 9 de marzo) Dontildea Briolanga recibiacutea cada antildeo para su mantenimiento 100000 maravediacutes del almirante mayor de las Indias por medio de Gaspar Gurricio monje del monasterio de Santa Mariacutea de las Cuevas (AHPS Libro 1510 Oficio XV Libro II Es-cribaniacutea Bernal Gonzaacutelez Vallesillo Folio primer tercio del legajo Fecha 4 de julio) Resulta interesante hacer notar la temprana presencia (1516) de un ingleacutes en Santo Domingo involucrado igualmente en la compra de telas Se trata de laquoNicolas Arnoteraquo residente en Santo Domingo que debe pagar a Mariacutea Caldera mujer del comendador Diego Barbosa el valor de una cama de sargas de colores de Flandes (AHPS Libro del antildeo 1516 Oficio XV Libro II Escribaniacutea Bernal Gonzaacutelez Vallesillo Folio Primer tercio del legajo Fecha 28 de agosto) Sin embargo anteriormente a esa fecha (1514) encontramos a un veneciano casado con una inglesa mucho maacutes ceacutelebre en sus viajes trasoceaacutenicos laquoSevastiaacuten Cavotoraquo capitaacuten del rey don Fernando y vecino de Sevilla136

De forma paralela se observa tambieacuten un cierto desenvolvimiento de la mujer en su medio lo que equivaliacutea a intercambios de informacioacuten a todos los niveles incluyendo por lo tanto el cultural No era extrantildeo que tuviesen libros de comedias a mano y que llegasen incluso a escribir comedias ellas mismas Efectivamente la sospecha de que las damas llegasen a escribir comedias estaba bien fundada Veacuteanse algunos ejemplos Ana Caro Malleacuten de Soto una de las maacutes famosas dramaturgas de la Sevilla del siglo XVII autora de El conde de Partinupleacutes utiliza el tema del amor en sus maacutes diversas variantes fiacutesicas y espirituales como el eje de casi todas sus obras (Perry 57) Este hecho por otra parte indica el favor del puacuteblico ante un tema tan popular Veacutease otro ejemplo

The drama of this period did not present love and marriage as a simple partnership however and many dramatists contrasted laquoprofaneraquo with laquohonestraquo love Feliciana Enriacutequez de Guzmaacuten who wrote Tragicome-dia Los jardines y campos sabeos in Seville in the early seventeenth cen-tury presented the hero Clarisel as the victim of laquopervertedraquo and fickle Belidiana in part 1 so blinded by her beauty that he feels himself laquoin shackles and in chainsraquo (Perry 57)

Pero las damas espantildeolas de esta eacutepoca no soacutelo escribiacutean comedias algunas tambieacuten se aventuraron a escribir tratados cientiacuteficos Uno de estos casos fue el de Oliva Sabu-co de Nantes Barrera que a finales del siglo xvi escribioacute un tratado meacutedico sobre la naturaleza humana advirtiendo que la lujuria podiacutea perjudicar al cuerpo Se basaba en

136 Sebastiaacuten Caboto o laquoSevastiaacuten Cavotoraquo estaba casado con Juana Cavoto vecina que fue de la ciudad de Londres en la parroquia de San Gil (AHPS Libro del antildeo 1514 Oficio I Libro II Escribaniacutea Mateo de la Cuadra Folio 253 Fecha 14 de Septiembre) citado en CFAAPS Vol 3 doc 128 p 37

149ESPANtildeOLAS DE ULTRAMAR EN LA HISTORIA Y EN LA LITERATURA

la presuncioacuten de que la lujuria provocaba que el cerebro emitiese un liacutequido que iba al estoacutemago enfriaacutendolo y debilitaacutendolo interrumpiendo de esta manera las funciones vitales (Perry 58)

Se sabe que en la eacutepoca de Isabel la Catoacutelica habiacutea muchas mujeres estudiantes y que la propia reina las impulsaba a estos menesteres iniciativa que obtuvo sus frutos en las deacutecadas siguientes Ademaacutes de las conocidas novelistas Mariacutea de Zayas y Sotomayor y dontildea Mariana de Carvajal existioacute toda una serie de escritoras de todos los geacuteneros lite-rarios que florecieron a ambos lados del Atlaacutentico y que no solamente llaman la aten-cioacuten por su nuacutemero sino por la calidad de sus obras Algunas de ellas como dontildea Luisa de Padilla condesa de Aranda calificada por Serrano y Sanz como laquola maacutes notable de cuantas florecieron en Espantildea en el siglo XVIIraquo personificaraacuten a la perfeccioacuten a este tipo de mujeres Tambieacuten deberiacuteamos saber cuaacutentas seriacutean las mujeres que escribieron con pseudoacutenimos masculinos

La informacioacuten sobre las diferentes facetas de la vida femenil con que contamos no es abundante A pesar de todo podemos hacernos una idea maacutes clara de la verdadera situacioacuten de la mujer a traveacutes de una nueva interpretacioacuten de los textos tanto de los medievales como de las croacutenicas de los primeros antildeos del descubrimiento y conquista Algunos estudios relativamente recientes surgidos por el intereacutes general que suscita todo lo concerniente a la mujer han ayudado a considerar nuevas perspectivas La eru-dicioacuten moderna estaacute poniendo en tela de jucio los estereotipos tradicionales en cuanto a la pasividad y relevancia femeninas asiacute como al tradicional misogenismo que se atri-buye a la eacutepoca medieval Cada vez estaacute maacutes claro que la existencia de estas mujeres variaba considerablemente seguacuten la eacutepoca posicioacuten social o situacioacuten geograacutefica por lo que hacer valoraciones categoacutericas sobre laquola situacioacuten de la mujerraquo puede llevar a graves equivocaciones (Dillard 9) Es fundamental para comprender a la mujer espa-ntildeola que pasoacute al Nuevo Mundo tener en cuenta las enormes diferencias de todo tipo que existieron en la sociedad castellana y novomundista Un pintoresco ejemplo es el de laquolas tapadasraquo una usanza de origen aacuterabe que se pondriacutea de moda en Castilla poco despueacutes de la toma de Granada por los Reyes Catoacutelicos y que despueacutes pasariacutea al Peruacute Esta tradicioacuten ha perdurado en algunos pueblos de Espantildea hasta relativamente poco tiempo pueblos como Mojaacutecar (Almeriacutea) y Vejer de la Frontera (Caacutediz) son ejemplo de esta costumbre tambieacuten conocida como el de las laquocobijaacutesraquo

Tras la caiacuteda del reino musulmaacuten de Granada en 1492 la corona espa-ntildeola prohibioacute a las mujeres aacuterabes de Andaluciacutea vestir los velos islaacutemi-cos que cubriacutean sus rostros y ocultaban su identidad No era faacutecil des-arraigar esta costumbre tan ancestral y secular y el emperador Carlos asiacute como su hijo el rey Felipe II tuvieron que repetir la prohibicioacuten Cuando finalmente las moras fueron obligadas a abandonar sus velos y a adoptar el chal castellano comenzaron a utilizar la nueva prenda para cubrir sus rostros dejando al descubierto soacutelo uno de los ojos Esta nueva moda en el uso del chal tradicional nos asegura leoacuten Pi-nelo era extremadamente graciosa sensual y atractiva a causa de la belleza exoacutetica de los ojos de las moras Las mujeres cristianas de Granada Coacuterdoba y Sevilla imitaron pronto la nueva moda de llevar el chal y asiacute nacioacute la laquotapadaraquo hispana Desde Sevilla la nueva moda

150 JUAN FRANCISCO MAURA

fue a las colonias de ultramar y tomoacute raices especialmente en el Peruacute (Martiacuten 317-18)

En un reciente estudio sobre la educacioacuten de la mujer en la Ameacuterica virreinal apare-cen algunos ejemplos significativos de mujeres espantildeolas que consagraron gran parte de sus vidas a la tarea docente Dentro del proceso educativo de las espantildeolas que fueron a las Indias destaca el papel de dontildea Catalina de Bustamante Joseacute de Jesuacutes Vega y Ma-riacutea Luisa Caacuterdenas de Vega dicen en su obra Ameacuterica Virreinal La Educacioacuten de la mujer que esta mujer pocos antildeos despueacutes del descubrimiento del Nuevo Mundo se dedicoacute a trabajar en favor de los indios aunque por desgracia su nombre y sus hechos en la labor docente hayan sido ignorados por los historiadores modernos (Vega 12-13)

Son varias las veces que se nombra a Catalina de Bustamante en el citado estudio y varias las fuentes antiguas en que se recoge la presencia de tan distinguida laquomatrona muy honrada y de buen ejemploraquo de la que ya hablaba Zumaacuterraga y sobre la que se hizo un informe enviado a Carlos V describiendo sus actividades en la Nueva Espantildea firmado por cuatro de los misioneros maacutes conocidos de Meacutexico

El informe dice que los franciscanos de Texcoco acababan de cons-truir un nuevo monasterio y cedido el antiguo A una honrada y honesta y muy virtuosa matrona que se dice Catalina de Bustamante para que ende instruyese a las hijas de los sentildeores de la comarcala cual con el favor de Dios y limosnas que don Hernando [Corteacutes] les haciacutea para su sustentacioacuten [teniacutea en esa casa-hogar] hasta trescientas mujeres antes maacutes que menos (Vega 14)

Estas laquocasas-hogarraquo no estaban regentadas necesariamente por monjas sino por lo que llamaban laquobeatasraquo mujeres que sin estar estar sujetas a la autoridad eclesiaacutestica se dedicaban a un laquolucro honestoraquo Llamadas tambieacuten laquobeateriosraquo eran diferentes a los conventos de monjas y constituiacutean las primeras escuelas de la mujer en la Nueva Espa-ntildea (Vega 20-21) Fue gracias al ejemplo de mujeres como Catalina de Bustamante que dedicaron sus vidas a la educacioacuten de los indiacutegenas que existiesen otras continuando su ejemplo Motoliniacutea dice claramente que laquode ese primer encerramiento (el de Texcoco regentado por Catalina) salieron otras honestas y muy virtuosas duentildeas que ensentildeaban a las maacutes menudasraquo (Vega 23)

Pero dontildea Catalina de Bustamante pese a ser una singular mujer y la iniciadora de la educacioacuten de la mujer en Meacutexico no fue un caso aislado corresponde maacutes bien a un patroacuten al que se ajustaron muchas de las pioneras de la Nueva Espantildea que sembraron instituciones de educacioacuten de la mujer En 1530 unos antildeos maacutes tarde aparecioacute una de las grandes protectoras de la instruccioacuten femenina en Ameacuterica La emperatriz Isabel de Portugal (Vega 24)

Desde comienzos de la conquista fueron varios los centros docentes regentados por mujeres en los que la ensentildeanza no estaba impartida por monjas Una de las institucio-nes maacutes sobresalientes del sistema educativo fue el Colegio de Nintildeas que se establecioacute en la ciudad de Meacutexico a principios del siglo XVI con maestras que no eran monjas Estas seglares conocidas comunmente como laquomigasraquo eran las descendientes de las antiguas beatas Su ubicacioacuten permanente fue determinada en 1548 lugar que serviriacutea de escue-la ininterrumpidamente hasta 1862 cuando el edificio fue convertido en bodega (Vega 60) No se debe perder de vista que no soacutelo por el hecho de llevar una vida secular se

151ESPANtildeOLAS DE ULTRAMAR EN LA HISTORIA Y EN LA LITERATURA

gozaba de maacutes privilegios Era maacutes bien al contrario En las carreteras las mujeres segla-res no inspiraban el mismo respeto que las monjas que ademaacutes teniacutean contacto cons-tante con personas de los dos sexos no pertenecientes a la Iglesia (Arenal 297) Ademaacutes dentro de las murallas del convento desapareciacutean muchas de las barreras sociales que limitaban a la mujer de esta eacutepoca

La presencia femenina y la monarquiacutea

Pues iquestcoacutemo sabes tuacute preguntoacute don Quijote que los grandes llevan detraacutes de siacute a sus caballerizos Yo seacute lo direacute respondioacute Sancho Los antildeos pasados es-tuve un mes en la corte y alliacute vi que paseaacutendose un se-ntildeor muy pequentildeo que deciacutean que era muy grande un hombre le seguiacutea a caballo a todas las vueltas que daba que no pareciacutea que era su rabo Pregunteacute que coacutemo aquel hombre no se juntaba con el otro sino que siempre anda-ba tras deacutel Respondieacuterome que era su caballerizo y que era uso de grandes llevar tras siacute a los tales Desde enton-ces lo seacute tan bien que nunca se me ha olvidado (Cervan-tes Don Quijote)

Los monarcas espantildeoles fueron conscientes de que sin la presencia femenina difiacute-cilmente se podriacutea solidificar una conquista a todos los niveles La mayor parte de los virreyes y altos cargos trajeron a sus mujeres con ellos y en las ciudades principales de Hispano-Ameacuterica como la ciudad de Meacutexico Guatemala Lima o Potosiacute habiacutea mujeres que disfrutaban de una esmerada educacioacuten (gramaacutetica latiacuten poesiacutea historia muacutesica) Esto dariacutea origen a una elegante y hasta cierto punto sofisticada sociedad en la que las mujeres tomaron parte en asuntos maacutes importantes que los que sus homoacutelogas toma-ran en las colonias portuguesas laquoThere were brilliant vice-regal courts at Mexico City and Lima far exceeding anything that could be found in Portuguese or English America during the seventeenth centuryraquo (Boxer 39) Las estadiacutesticas con las que contamos hoy no soacutelo demuestran que las mujeres llegaron al Nuevo Mundo en respetables porcen-tajes sino que ademaacutes tuvieron una participacioacuten activa llegando a intervenir en algu-nos casos en las liacuteneas de vanguardia Resulta difiacutecil aproximarse al estado de aacutenimo de aquellas mujeres que vivieron en eacutepocas tan lejanas Para ello es necesario indagar en los documentos de la eacutepoca para lograr rescatar del pasado todos esos tesoros de la historia muchas veces tergiversados y manipulados con el fin de que sirvan a propoacutesi-tos actuales Es en los viejos manuscritos donde queda testimoniada su presencia tan rica en dolores tragedias y por queacute no en amores Fue la llegada de estas mujeres una brisa de esperanza y de ilusioacuten para aquellos que ya estaban en las tierras de ultramar y

152 JUAN FRANCISCO MAURA

veiacutean venir de su propia tierra aquello que maacutes antildeoraban amantes madres hermanas Un haacutelito de vida y poesiacutea que suavizaba las costumbres de estos rudos y romaacutenticos pioneros laquoporque para ser hombres de tales empresas algo de romaacutentico debioacute de existir en ellos y que es tan propio del espantildeol y abandonariacutean en brazos tan gentiles sus bruscos modales que habiacutean adquirido en aacutespero contacto en selvas y montantildeasraquo (Villafantildee 125)

Hoy sabemos que en la normativa oficial de la Espantildea del siglo XVI y XVII se favoreciacutea el paso de mujeres al Nuevo Mundo Afirmar lo contrario no solamente es falso sino que implica un desconocimiento total de los primeros dos siglos de la colonizacioacuten espantildeola La presencia de estas mujeres espantildeolas fue efectiva laquolas disposiciones al respecto demuestran claramente que se teniacutea especial intereacutes en su arraigo y que se tra-taba de defender su posicioacuten de mujeres casadas con conquistadores y colonizadoresraquo (Villafantildee 126) Los monarcas comprendiacutean que era praacutecticamente imposible que los hombres viviesen sin mujeres y que de ser asiacute era de esperar que se cometiesen abusos con las indias lo que incidiriacutea en la moral social y en el buen gobierno de la colonia Ademaacutes sin un asentamiento definitivo con hogares y familias difiacutecilmente se podriacutea llevar a cabo una presencia permanente en las nuevas colonias (Orsquo Sullivan-Beare 45)

Empezando por los Reyes Catoacutelicos la preocupacioacuten de que en las colonias se esta-bleciesen nuacutecleos que tuviesen como base la familia cristiana fue clara Las capitulacio-nes que a este efecto se hicieron entre los conquistadores y la Corona fueron nume-rosas La efectuada entre Rodrigo de Baacutestidas y Carlos V puede ser un buen ejemplo Fechada en Valladolid el 6 de noviembre de 1524 muestra el propoacutesito de Baacutestidas de establecer una colonia permanente en la desembocadura del riacuteo Magdalena en el terri-torio que hoy vendriacutea a corresponder a Colombia El documento firmado por el Empe-rador comienza asiacute

El Rey Por cuanto por parte de vos Rodrigo de Baacutestidas vecino de la ciudad de Santo Domingo de la Isla Espantildeola Me fueacute fecha relacioacuten que por servicio de la Catholica Reyna Mi Sentildeora e Nuestro os ofre-ceacuteis de poblar e poblariades la provincia e puerto de Santa Marta que en Castilla de Oro llamada la Tierra Firme e que la poblariades dentro de dos antildeos siguientes haciendo en ella un pueblo en que no menos haya en eacutel al presente cincuenta vezinos que los quince de ellos sean casados y tengan consigo a sus mujeres y que lo teniades fecho dentro de dos antildeos y de hoy en adelante lo maacutes que fuese posible asiacute de cris-tianos espantildeoles como de indios (Restrepo 1 30)

De igual manera el priacutencipe Felipe (futuro Felipe II) en las capitulaciones establecidas en 1547 con Juan de Sanabria para que eacuteste fuese como gobernador y capitaacuten general de la dicha provincia escribe lo siguiente laquoPrimeramente que seais obligado e os obligeis a llevar destos Reynos de Castilla a la dicha provincia del Rio de la Plata cien casados con sus mujeres e hijos para poblar la dicha provincia y con ellos llevareis a vuestra muger e hijos (CDI de Ameacuterica y Oceaniacutea 23 119)

En numerosas ocasiones se pone de manifiesto el apoyo de la monarquiacutea a la emigra-cioacuten femenina tantas que difiacutecilmente se podriacutean enumerar todos los casos Lo cierto es que la legislatura vigente favoreciacutea la emigracioacuten y traslado de mujeres con toda una se-

153ESPANtildeOLAS DE ULTRAMAR EN LA HISTORIA Y EN LA LITERATURA

rie de alicientes137 sobre todo si eacutestas estaban casadas pasaje para llevar a las familias franquicia de derecho para los artiacuteculos que portasen consigo favoritismo en cargos destinos y contrataciones a aquellos que pasasen con sus mujeres incluyendo ademaacutes de los castellanos y leoneses a suacutebditos de otras partes de la corona incluso genoveses y portugueses si estos veniacutean acompantildeados de sus consortes (Fernaacutendez Duro 15-16)

Incluso se llegoacute a imponer penas a aquellos hombres casados que no llevasen a sus mujeres con ellos a Indias en el teacutermino de un antildeo El mismo emperador en una ceacutedula otorgada al virrey de la Nueva Espantildea le recomendaba que laquoprocurase persuadir a ca-sarse a los solteros que estuviesen en edad y situacioacuten de hacerloraquo prometieacutendoles que al efectuar el matrimonio seriacutean preferidos en el reparto de indios En la isla de San Juan de Puerto Rico los cargos oficiales y oficios puacuteblicos debiacutean de ser desempentildeados por los casados en primer lugar En Meacutexico ocurrioacute lo mismo con los cargos de corregido-res (Konetzke laquoemigracioacutenraquo 140-41) Felipe II al igual que sus antecesores y sucesores reiteraraacute y justificaraacute los beneficios de los que seraacuten acreedores aquellos que tengan allaacute a sus mujeres laquoque los que han servido en los descubrimientos de las dichas Indias y tambieacuten los que ayudan a la poblacioacuten dellas que tienen allaacute sus mugeres sean preferi-dos en los aprouechamientos qualesquierraquo mandando que despueacutes de los conquistado-res se tuviera en cuenta para la laquoprovisioacuten de los corregimientosraquo a los colonos casados siempre que estuvieran capacitados para dichos cargos (Konetzke laquoemigracioacutenraquo 141)

Las disposiciones en favor del matrimonio son claras ya sea por medio de un favo-ritismo manifiesto como en los casos antes citados o mediante medidas de cohercioacuten para que esta poliacutetica se llevase a cabo Don Sebastiaacuten Ramiacuterez de Fuenleal obispo de Santo Domingo y presidente de la Audiencia de Meacutexico propuso que a aquellos enco-menderos que no estuviesen casados y que no hubiesen tomado parte en la conquista se les quitase los indios concedidos con la obligacioacuten de devolveacuterselos si en el plazo de un antildeo habiacutean contraiacutedo matrimonio (Konetzke laquoemigracioacutenraquo 142-43) Por supuesto hubo excepciones a estas reglas En algunos casos ni la mujer teniacutea especial intereacutes en vivir junto con su marido en las Ameacutericas ni el marido queriacutea ir a buscar a su mujer pasado el plazo de un antildeo En el presente documento y de forma excepcional las auto-ridades reales protegen a los conyuges para que puedan seguir viviendo separados en continentes diferentes

Nuestras justicias de la ysla de Cubagua e otras qualesquier de las nuestras Yndias yslas e tierra firme del mar oceacuteano e a cada uno e qualquier de vos a quieacuten esta mi ceacutedula fuese mostrada por parte de Alonso de Tapia nuestro veedor de la provincia de Paria me ha sido hecha relacioacuten que ha mucho tiempo que reside en esas partes donde nos ha servido en lo que se ha ofrecido e que agora vos otros le apre-miaacuteis a que venga o embiacutee a estos Reinos por su muger lo cual no puede al presente hazer a causa de no ter posibilidad para ello a mi me ha suplicado vos mandase que no le compeliacuteesedes ny apremiaacutesedes a que viniese o enviase por la dicha su muger y dieacutesedes por libres los fiadores que tenyades para que dentro de un antildeo embiariacutea o verniacutea por

137 Reales Ceacutedulas de los antildeos 1502 y 1503 Academia de la Historia Coleccioacuten Muntildeoz tomo 75 fols 209 y 220 citado por Fernaacutendez Duro 15

154 JUAN FRANCISCO MAURA

ella o como la mi merced fuese lo cual visto por los de nuestro consejo juntamente con una peticioacuten presentada por dontildea Mariacutea Gudiel muger del dicho Alonso de Tapia por la cual nos suplica lo mismo que acor-dado que debiacutea mandar esta mi ceacutedula para vos por la qual vos mando que no compelaacuteis ni apremieacuteis al dicho Alonso de Tapia a que venga ni enviacutee a estos reinos por la dicha su muger si no fuere a que la pro-vea de lo que fuere necesario para su mantenimiento y deys por libres quales quier fianzas que sobre ello haya dado e no fagades ende al por alguna manera Firmado en la villa de Valladolid a VII diacuteas del mes de febrero de mil e quinientos e treinta y siete antildeos yo el licenciado Con-de de Samano y sentildealada del cardenal Beltraacuten y Carbajal [Aparte en letra pequentildea] Este diacutea se despachoacute una provisioacuten por la cuaacutel su Mag hizo merced a Alonso de Tapia de la veedoriacutea de la provincia de Paria por muerte de Garciacutea de Aguilar con las clausulas ordinarias y con el mismo salario que teniacutea Aguilar Firmado del emperador y de Beltraacuten y Bernal y Velaacutezquez El Rey (Registro de disposiciones Riacuteo Marantildeoacuten AGI Indiferente General Legajo 416 libro 2 Fols 94v y 95r)

El punto maacutes interesante a destacar de todas estas disposiciones oficiales en cuanto a la emigracioacuten femenina al Nuevo Mundo no es otro que la libertad que se da a la mujer de decidir si quiere o no casada o sin casar trasladarse al nuevo continente no como una imposicioacuten sino como un precepto laquoel espiacuteritu de las disposiciones en el sentido de asegurar la vida marital de los casados significa que la mujer que su marido invita a pa-sar a las Indias puede negarseraquo (Villafantildee 127) Habriacutea que ver las opciones laquorealesraquo ade-maacutes de las legales y econoacutemicas que le quedaban a la mujer si tomaba esta decisioacuten

El saber la libertad de eleccioacuten que estas mujeres teniacutean de antemano antes de aden-trarse en las interminables penalidades y aventuras que los viajes de la navegacioacuten tran-soceaacutenica suponiacutean hace que sus hechos y esfuerzos cobren auacuten maacutes relieve En nume-rosas ocasiones estas mujeres cruzaron el oceacuteano una y maacutes veces sin otro motivo que el de defender los derechos e intereses de los suyos Lo que resulta maacutes valioso de todo esto es que lo hicieran por propia iniciativa arriesgando sus vidas para que se hiciese justicia y para que no les faltase lo necesario a aquellos que estaban en la otra orilla Las autoridades vigentes conocedoras de los vaciacuteos legales existentes en las nuevas colo-nias se apresuraron a poner en vigor aquellas normas que redundaran en el beneficio de los menos favorecidos por las circunstancias La institucioacuten del matrimonio cuya trans-cendencia es fundamental en la vida juriacutedica y social de la mujer tuvo que ser legislada en Ameacuterica con una serie de nuevas disposiciones agregados modificaciones y aclara-ciones Asiacute pues la legislacioacuten de base espantildeola tuvo que sufrir en tierras americanas esta serie de cambios por motivos poliacuteticos y sociales (Villafantildee 126)

Para hacer un sumario de lo dispuesto hasta el siglo XVI en cuanto a la legislacioacuten de las mujeres que teniacutean familia o intereses en Indias merece la pena mencionar que existieron una serie de disposiciones que protegiacutean a las mujeres para que eacutestas no se viesen abandonadas por sus maridos En un epiacutegrafe de la Recopilacioacuten de 1680 (libro VII tiacutetulo 3) se deja ver claramente la preocupacioacuten de las autoridades en este asunto laquoDe los casados en Espantildea e Indias que estaacuten ausentes de sus mujeres y esposasraquo (Vi-llafantildee 126-27)

155ESPANtildeOLAS DE ULTRAMAR EN LA HISTORIA Y EN LA LITERATURA

La lista de disposiciones se hace interminable En los reinados de Fernando el Catoacute-lico Carlos V Felipe II Felipe III o incluso Carlos II la insistencia es constante La ra-zoacuten de esta insistencia seriacutea bastante obvia dado que con un oceacuteano por medio seriacutean muchos los que se aprovechasen de llevar una doble vida marital sin el estricto control y vigilancia de sus mujeres que se encontraban en la peniacutensula La ley XXVII libro IX tiacutetulo XXVI determina laquoDeclaramos por personas prohibidas para embarcarse y pasar a las Indias todos los casados y desposados en estos reinos lsquosino llevaren con ellos sus mujeresrsquo aunque sean virreyes oidores gobernadores o nos fuesen a servir en cual-quier cargo y oficios de Guerra Justicia y Hacienda porque es nuestra voluntad que todos los susodichos lleven a sus mujeresraquo (Villafantildee 127) laquoLos eclesiaacutesticos eran los en-cargados de dar cuenta a los tribunales competentes de aquellos que estando casados permaneciacutean en Indias sin sus mujeres Son reiteradas las disposiciones de Fernando el Catoacutelico en este sentidoraquo138 En 1514 el rey don Fernando ordena en una provisioacuten para la isla Espantildeola laquodoy licencia eacute facultad aacute cualquier persona naturales de estos Reynos para libremente se puedan casar con mujeres naturales de esa dicha ysla sin tener que incurrir por ello en pena algunaraquo (Villafantildee 129)

No se debe olvidar tampoco a aquellas mujeres que decidieron pasar a las laquonuevas tierrasraquo solteras Estas mujeres tambieacuten tuvieron un papel importante en el desarrollo de las nuevas colonias Los organismos espantildeoles del momento como los mandatarios indianos y todos los cronistas no dejaron pasar desapercibida la importancia social de estas mujeres en la poliacutetica de poblamiento laquo[E]s cierto que los pueblos de Indias nuevamente poblados no se tienen por fijos o estables ni permanentes hasta tanto que mujeres espantildeolas entren en ellos y los encomenderos y conquistadores se casen por muchas causas y respetos buenos y saludables que para ello hayraquo (Villafantildee 126-27)

Si la intencioacuten era la de una presencia permanente en las tierras americanas la mujer soltera que pasase a ellas siempre seriacutea un motivo maacutes para el colono o conquistador de continuar en el mismo suelo Se podriacutea empezar una familia si asiacute se quisiese sin tener que pensar en volver a la metroacutepoli ya fuese a disfrutar de los bienes adquiridos o a laquobuscarraquo una esposa El problema aparecioacute cuando se produjo un exceso de mujeres solteras lo que de alguna manera alteroacute la estructura social existente ya que no habiacutea muchas opciones para ellas aparte del matrimonio o el convento

En consideracioacuten a que la experiencia habiacutea demostrado que un exce-sivo nuacutemero de mujeres ejerciacutea perniciosa influencia sobre la moral y las costumbres se suplicaba al rey no otorgase a aquellas tantas auto-rizaciones para emigrar al Peruacute La ciudad de la Plata fundada en 1538 emite en 1577 un informe en el que se expone la urgente necesidad de que se funde un convento de monjas pues en el territorio de las Au-diencias de Los Charcas existiacutea un gran nuacutemero de muchachas que no pudieacutendose casar se hallaban en gran peligro de perderse (Konetzke laquoemigracioacutenraquo 149)

138 Solorzano Pereira Juan de Libro Primero de la Recopilacioacuten de las Ceacutedulas Reales Cartas y Provisiones y Or-denanzas Reales Noticia preliminar de Ricardo Levenne Universidad de Buenos Aires Facultad de Derecho Y Ciencias Sociales Pub del Instituto de Historia del Derecho Argentino Coleccioacuten de Textos y Documentos para la Historia del Derecho Argentino t V Buenos Aires Imp de la Universidad de Buenos Aires 1945 (Li-bro I Ley 10 laquoQue los Espantildeoles puedan casar con Indias y al contrario a su voluntadraquo t2 p 138 citado en Villafantildee 129

156 JUAN FRANCISCO MAURA

Entristece ver coacutemo se manejan las cifras de estas mujeres como si de ganado o de bienes suntuarios se tratase Por otra parte existieron irregularidades como la de pobla-doras espantildeolas que vivieron amancebadas con hombres que ya estaban casados en la peniacutensula Normalmente esto ocurriacutea cuando la estancia del conquistador se prolonga-ba maacutes de lo debido en lugares donde habiacutea pocas espantildeolas Muchas veces nacieron hijos de estas uniones que hicieron auacuten maacutes difiacutecil la situacioacuten para las mujeres que esperaban en Espantildea a un marido que ya no teniacutea ningunas intenciones de volver En los juicios de residencia los documentos acostumbran a citar estos casos ya que era parte de su obligacioacuten castigar las irregularidades extramatrimoniales y salvaguardar las buenas costumbres familiares que con tanto intereacutes se deseaba mantener laquoUn ejemplo nos lo da la isla de Cuba donde en 1532 viven con hombres casados Olalla Hernaacuten-dez Santillana Aranda lsquola Cordobesarsquo Catalina de Leoacuten Catalina Saacutenchez Francisca Hernaacutendez Mayor de Azebedo Juana de Valeros y lsquouna mujer que estaba en casa de Ayalarsquoraquo (Borges 416)

Estos casos no fueron aislados y mucho menos en Cuba centro neuraacutelgico de todo el movimiento de ida y vuelta entre la metroacutepoli y el Nuevo Mundo Estas ocho acusa-ciones por lo tanto no tienen porqueacute considerarse extraordinarias y menos en el lugar maacutes cosmopolita de las Indias en esos momentos al que llegaban flotas a cada momen-to Al parecer existieron casos parecidos en el Riacuteo de la Plata Peruacute y Nueva Espantildea (Ratcliffe 347) El margen legal para que estas mujeres viviesen como quisiesen estuvo limitado por una moral que veiacutea uacutenicamente en el matrimonio o el convento una salida laquovaacutelidaraquo para que fueran aceptadas socialmente Los hombres en iguales circunstan-cias fueron juzgados por una laquomoralraquo mucho maacutes permisiva

La mujer y el cuerpo eclesiaacutestico

Pues iquestquieacuten diablos os traiacutedo aquiacute dijo don Quijote siendo hombre de la iglesia iquestQuieacuten sentildeor replicoacute el caiacutedo laquomi desventuraraquo Pues otra mayor os amenaza dijo don Quijote sino me satisfaceacuteis a todo cuanto primero os pregunteacute (Cervantes Don Quijote )

Otro factor a tener en cuenta en un anaacutelisis sobre la presencia de la mujer en el Nuevo Mundo es el que tiene que ver con la institucioacuten maacutes importante de las que llegaron desde Europa la iglesia catoacutelica Sin aacutenimo de criticar a tan compleja institucioacuten res-ponsable de gran parte de los aconteceres en el Nuevo Mundo vale la pena analizar algunas singularidades Muchos de sus miembros fueron grandes ejemplos de valor e inteligencia a la hora de tratar los maacutes variados y escabrosos asuntos con los que se encontraron los cristianos en la otra orilla durante este periacuteodo Se debe resaltar tam-

157ESPANtildeOLAS DE ULTRAMAR EN LA HISTORIA Y EN LA LITERATURA

bieacuten su caraacutecter medieval en la manera de hacer apostolado y de entender y tratar a los potenciales cristianos Si se tienen en cuenta los privilegios y prerrogativas que algunas de las altas jerarquiacuteas eclesiaacutesticas tuvieron no seriacutea superfluo estimar que un respeta-ble porcentaje de la poblacioacuten de origen laquodudosoraquo muy bien podiacutea venir de la misma iglesia Fueron muchas las viacutectimas y muchas las familias divididas por un padre laquoinvi-sibleraquo Gran parte de los hijos o laquosobrinosraquo de estos sacerdotes pasaron a ocupar cargos similares incluyendo los privilegios que estos cargos llevaban consigo como si se trata-se de cualquier otro oficio gremial transmitido generacionalmente regla tan comuacuten en la Europa medieval Todaviacutea a finales del siglo XIII en Espantildea los derechos de los hijos y nietos de los sacerdotes estaban protegidos por la ley sin que hubiesen podido ser erradicados por las reformas gregorianas (Ratcliffe 347)139

Las letras espantildeolas ya se haciacutean eco de estos lances amorosos entre representantes de la Iglesia y ciertas damas del lugar desde los tiempos del poeta riojano Gonzalo de Berceo En su obra maacutes conocida Los milagros de Nuestra Sentildeora Berceo describe con un realismo ingenuo y sencillo relatos de humor y de humanismo sobre aquellos hombres de carne y hueso que eran perdonados por la intercesioacuten de la Virgen Mariacutea Juan Ruiz por su lado haraacute de su Libro de buen amor la obra maacutes representativa en este sentido Seriacutea prolijo recordar la actuacioacuten de la Iglesia durante diversos periacuteodos de la Edad Media no soacutelo en Espantildea sino en toda Europa En la Espantildea musulmana del siglo XII concretamente en Sevilla el comportamiento de los representantes de la iglesia cristia-na (mozaacuterabe) en territorio islaacutemico es duramente criticado por el sevillano Ibn Abdun Este precioso documento muestra el estricto control y falta de confianza que existiacutea sobre la mujer prohibieacutendolas que entrasen en las laquoabominablesraquo iglesias cristianas

porque los cleacuterigos [cristianos] son libertinos fornicadores y sodomi-tas Asimismo debe prohibirse a las mujeres francas que entren en la iglesia maacutes que en diacuteas de funcioacuten o fiesta porque alliacute comen beben y fornican con los cleacuterigos y no hay uno de ellos que no tenga dos o maacutes de estas mujeres con que acostarse Han tomado esta costumbre por haber declarado iliacutecito lo liacutecito y viceversa Convendriacutea pues mandar a los cleacuterigos que se casasen como ocurre en Oriente y que si quie-ren lo hagan (Leacutevi-Provenccedilal 150)

Pese a existir una convivencia paciacutefica durante gran parte de la Edad Media entre los tres credos monoteiacutestas de Espantildea (cristianos musulmanes y judiacuteos) esto no suponiacutea que no existiese desprecio y desconfianza entre estos grupos religiosos Dice Abdun resaltando el peligro que suponiacutea que una mujer entrase en casa de un cleacuterigo cristiano de vida ceacutelibe

No debe tolerarse que haya mujer sea vieja o no en casa de un cleacuterigo mientras eacuteste rehuacutese casarse Obliacutegueseles ademaacutes a circuncidarse co-mo les obligoacute al-Mutadid pues si a lo que dicen siguen el ejemplo de Jesuacutes (iexclDios les bendiga y salve) Jesuacutes se circuncidoacute y precisamente ellos que han abandonado esta praacutectica tienen una fiesta que celebran solemnemente el diacutea de su circuncisioacuten (Leacutevi-Provenccedilal 150-151)

139 Valdriacutea la pena ver si han cambiado mucho las cosas desde hace quinientos antildeos a esta parte o si in-cluso la iglesia moderna ha retrocedido en tolerancia en cuanto a las relaciones sexuales de los representantes de la Iglesia

158 JUAN FRANCISCO MAURA

El historiador argentino Germaacuten Arciniegas recoge un pasaje ilustrativo de lo men-cionado anteriormente pero trasladado al ambiente de la colonia diciendo que incluso en poblaciones pequentildeas como Santa Fe con poco maacutes de un convento y una ermita la fragilidad de la carne enredaba a frailes soldados y virreyes por igual laquoEl buen So-liacutes que murioacute en olor de santidad con la cabeza reclinada sobre un par de ladrillos y en saya de franciscano cruzaba en las noches el solar de su palacio para ir a besar a la Marichuelaraquo (118-19)

Arciniegas recoge tambieacuten un suceso aparecido en el diario de Lima en 1667 que no tuvo que ser extraordinario durante los primeros antildeos de la colonia laquoEl fraile carmelita mdashGrande hereje y siendo sacerdote deciacutea misa gran perro lujurioso deshonesto que relatando sus maldades dijo que en cierta ciudad habiacutea conocido carnalmente a maacutes de trescientas y sesenta mujeres y en un convento de monjas habiacutea cometido muchos sacrilegios Este lo trujeron preso de Buenos Aires por Chileraquo (119)

Las controversias de la iglesia moderna sobre las relaciones que los eclesiaacutesticos de-ben tener con el sexo femenino parece que no han encontrado todaviacutea respuesta Sigue existiendo miedo y recelo a que la mujer comparta no soacutelo poder en la jerarquiacutea de la iglesiacutea sino en la vida privada de los miembros de la institucioacuten En la Nueva Espantildea el primer obispo de Meacutexico Juan de Zumaacuterraga viendo en la mujer un ser de tentacioacuten irresistible prohibioacute terminantemente la presencia de eacutestas en su casa Ni siquiera para su limpieza y aseo El franciscano Juan de Torquemada se refiere a este comportamien-to como una de las virtudes del popular obispo

Fue este benditiacutesimo prelado muy amigo de la virtud y de virtuosos y aceacuterrimo reprehendedor de vicios y viciosos y tan enemigo de la ociosidad que no permitiriacutea que alguno de su casa estuviese ocioso fue amiciacutesimo de la limpieza por lo cual jamaacutes consintioacute que mujer alguna entrase en su casa aunque fuese necesaria al servicio de ella ni nunca consintioacute que por alguna ocasioacuten subiese mujer a lo alto y aposentos de ella antes lo teniacutea todo cerrado como un monasterio porque sabiacutea (como quien tambieacuten sabiacutea) que la ocasioacuten suele derribar los maacutes fuertes y robustos corazones (450 lib 20 cap 31)

No fueron uacutenicamente miembros de la iglesia catoacutelica los que valoraron la lucha con-tra la tentacioacuten siguiendo al pie de la letra el crudeliacutesimo refraacuten laquoentre santa y santo pared de cal y cantoraquo Se tienen algunas noticias de la vida social de los primeros tiem-pos de la colonia En estos documentos se puede observar coacutemo no distaban mucho las oacuterdenes que se dictaban en la metroacutepoli y las que se llevaban a cabo en la Nueva Espantildea La vida social tanto de damas como de algunos miembros de la iglesia de las colonias era maacutes laquorelajadaraquo de lo que las normas permitiacutean Gracias a la informacioacuten ofrecida por Manuel Romero de Terreros disponemos de los nombres de las primeras virreinas

Las esposas de los primeros cinco Virreyes Don Antonio de Mendoza Don Luis de Velasco Don Gastoacuten de Peralta Don Martiacuten Enriacutequez de Almanza y Don Lorenzo Suaacuterez de Mendoza Conde de la Coruntildea fueron respectivamente Dontildea Caterina de Vargas Dontildea Ana de Cas-tilla y Mendoza hija de Don Diego de Castilla Sentildeor de Gor y Caba-

159ESPANtildeOLAS DE ULTRAMAR EN LA HISTORIA Y EN LA LITERATURA

llerizo de Carlos V Dontildea Leonor de Vieo Dontildea Mariacutea Manrique hija del Marqueacutes de Aguilar y Dontildea Catalina de la Cerda hija del segundo Duque de Medinaceli (Romero 2)

Existen noticias concretas de la seacuteptima virreina de la Nueva Espantildea (1586) dontildea Blanca de Velasco marquesa de Villamanrique En ellas destaca lo anteriormente men-cionado sobre la falta de tolerancia existente en aquellos tiempos difiacutecilmente com-prensible si no fuera por fragmentos esporaacutedicos conservados sobre la vida colonial en la Nueva Espantildea En la siguiente Relacioacuten hecha por autores anoacutenimos sobre la visita que hizo Fray Alonso Ponce Comisario General de la Orden Seraacutefica a las provincias de la Nueva Espantildea se mencionan las eneacutergicas medidas que con los miembros de su orden en su opinioacuten de moral laquomuy relajadaraquo tomoacute este religioso Tambieacuten aparecen mencionadas sus relaciones con la Virreina

Captoacutese ademaacutes la enemistad del gobernante y de la Virreina Dontildea Blanca de Velasco hija del cuarto Conde de Nieva sentildeora seguacuten pare-ce de conducta ligera y caraacutecter maacutes que dominante laquoPor este mismo tiempo (septiembre de 1586) fueron el Virey y la Vireyna a holgarse y recrearse en la cibdad de Xochimilco Posoacute con toda su casa dentro de nuestro convento en un dormitorio deacutel y detuacutevose alliacute siete u ocho diacuteas en que los indios les hicieron grandes fiestas aunque les costaron caras porque en una dellas murieron dos o tres dellos con un tiro que se disparoacute y reventoacute y al principal indio de aquella cibdad hirieron muy malraquo (Romero 3-4)

A pesar del riacutegido control eclesiaacutestico y civil que habiacutea en la Nueva Espantildea existieron tambieacuten pareacutentesis en los que incluso miembros de la iglesia y mujeres mdashhumanos al fin y al cabomdash pudieron disfrutar de algunos momentos de regocijo y alegriacutea Con-tinuando con la cita anterior el mismo autor se queja del laquoexcesoraquo de libertad en los frailes que se suponiacutea que teniacutean que profesar una extremada pobreza y no digamos castidad En primer lugar se describen pormenorizadamente la abundancia en el tipo y cantidad de comida de toda clase dulces y vino que se consumieron con largueza y generosidad durante aquellas fiestas Pero lo que maacutes indigna al autor (o autores) fue que llegasen a entrar mujeres en el convento

y aunque todo esto es malo delante de Dios y delante de los hom-bres lo que maacutes mal parecioacute y de que todo el mundo tuvo que mur-murar fueacute la demasiada libertad rotura y disolucioacuten que hubo en en-trar y estar muy de propoacutesito mujeres no soacutelo la Vireyna y las suyas sino otras muchas dentro del dicho convento y andar por las celdas como si fuese cosa profana y como si no hubiera breve apostoacutelico que soacute graves penas y censuras prohibe estas entradas y como si a los frai-les no los comprendiera el dicho breve por admitirlas y no estuviera asiacute declarado y mandado por nuestros estatutos generales de Toledo (Romero 4-5)

La preocupacioacuten por las laquotentaciones de la carneraquo fuera del matrimonio siempre es-tuvo en la mente de los religiosos espantildeoles asiacute como de otras nacionalidades y reli-

160 JUAN FRANCISCO MAURA

giones que intentaban vanamente erradicar algo tan intriacutenseco al ser humano como a cualquier otra especie animal Esta preocupacioacuten se acentuoacute mucho maacutes en el Nuevo Mundo donde muchas sociedades tribales no veiacutean a la mujer como parte integrante de su propiedad privada La razoacuten es obviamente socioloacutegica y ha existido desde el principio de los tiempos en las civilizaciones maacutes primitivas laquoNo desearaacutes a la mujer del proacutejimoraquo El quebrantar este precepto equivaldriacutea a desestabilizar desde su base a la sociedad judeo-cristiana fundamentada en la familia Las penas aplicadas en estas transgresiones seraacuten lo suficientemente severas como para marginar socialmente mdashen el mejor de los casosmdash a aquellos que las pongan en praacutectica Siendo la mujer la encar-gada por la naturaleza de trasmitir la descendencia de la especie su libertad sexual se veraacute limitada por el peligro de quedar embarazada cada vez que ignore tal elemental precepto140

Primeras escritoras del Nuevo Mundo

Contra cuerdos y contra locos estaacute obligado cualquier caballero andante a volver por la honra de las mujeres cualesquiera que sean Cuanto maacutes por las reinas de tan alta guisa y pro como fue la reina Madaacutesima a quien yo tengo particular aficioacuten por sus buenas partes porque fuera de haber sido fermosa ademaacutes fue muy prudente y muy sufrida en sus calamidades que las tuvo muchas (Cervantes Don Quijote)

Fueron varias las escritoras que durante los siglos XVI y XVII tuvieron una relacioacuten di-recta o indirecta con el Nuevo Mundo Muchas de ellas eligieron la vida monaacutestica mdashen algunos casos como refugio huyendo de sus maridosmdash uacutenica salida en una estructura social en donde no eran muchas las opciones especialmente en una eacutepoca donde el fac-tor religioso pesaba casi tanto como el econoacutemico pero sobre todo para dedicarse a una vida espiritual difiacutecilmente alcanzable en otras circunstancias Mariloacute Vigil apunta que las monjas que lo eran por su propia voluntad ademaacutes de tener inquietudes religiosas tambieacuten las teniacutean intelectuales como es el caso de la escritora miacutestica espantildeola Santa Teresa de Jesuacutes (1515-1582) que ademaacutes de tener una de las vidas maacutes interesantes que se conozcan supo sacar tiempo para escribir las maacutes bellas manifestaciones de la poesiacutea liacuterica y sobre todo de la prosa castellana (Vigil 237-38) Cada una de estas mujeres de-dicadas a la vida literaria y espiritual de su tiempo se merece muchiacutesimo maacutes espacio del que se les pueda ofrecer en estas pocas liacuteneas No obstante con estas pasajeras men-

140 Aunque afortunadamente las cosas han cambiado para la mujer no se debe dejar de mencionar la can-tidad de abusos sexuales de la que es viacutectima en la sociedad moderna

161ESPANtildeOLAS DE ULTRAMAR EN LA HISTORIA Y EN LA LITERATURA

ciones se espera al menos incluirlas y poder despertar el suficiente intereacutes para que sus vidas y sus obras no sigan sumergidas en las simas del olvido Para que estas mujeres de la iglesia pudiesen satisfacer su curiosidad cognoscitiva era necesario romper todas aquellas barreras que supusiesen un estorbo o una restriccioacuten a la hora de investigar consultar o hablar con cualquier persona religiosa de cualquier orden o secular ya fue-se obispo o cleacuterigo Las posiciones intelectuales entre las diferentes oacuterdenes religiosas fueron muy dispares como bien es sabido No eran iguales los planteamientos teoloacute-gicos de los dominicos que los de los franciscanos o los de los carmelitas que los de los agustinos o jesuitas Era necesario por lo tanto tener acceso a estas fuentes de informa-cioacuten para poder constrastar las diferencias y hacer valoraciones propias (Vigil 237-38) El escritor espantildeol Caro Baroja destaca el caraacutecter enciclopeacutedico del catolicismo donde se han integrado corrientes y posturas muy dispares que a traveacutes del diaacutelogo daban cierto espacio al creyente con maacutes curiosidad intelectual para que este pudiese compa-rar y valorar las diferentes opciones que se le ofreciacutean (Vigil 237-38)

Varias de estas mujeres intelectuales fueron hijas de conquistadores que aunque na-cidas en suelo americano seguiacutean expresaacutendose en la lengua de sus padres con no me-nos fuerza que sus contemporaacuteneas peninsulares Es cierto que existieron numerosas escritoras en el Nuevo Mundo durante el siglo XVIII algunas dedicadas incluso al estudio de las matemaacuteticas como la mexicana Dontildea Francisca Gonzaga y Castillo Pero para limitar el presente trabajo a los siglos XVI y XVII uacutenicamente se incluiraacuten ejemplos de estos dos siglos

La peruana Josefa de Alarcoacuten publicoacute en 1648 unas liras dedicadas a las Exequias del Priacutencipe Baltasar Carlos

Cifro en capilla breveEl tribunal de la Magestad maacutes graveEn fe de lo que debeA Carlos que en dos mundos no cabe141

El caso de Sor Jeroacutenima de la Asuncioacuten es muy interesante una mujer que tuvo la oportunidad de viajar a Meacutexico y posteriormente a las Filipinas para cumplir con las mi-siones que le habiacutean sido encomendadas por su orden Nacida en Toledo en 1555 en el seno de una noble y acaudalada familia estuvo destinada a recorrer el mundo ofrecien-do sus servicios a todos los necesitados distinguieacutendose por su ardiente caridad laquovien-do que los galeotes eran tratados con dureza excesiva sobre todo cuando los llevaban de un pueblo a otro procuroacute aliviar las penas de aquellos desgraciados y lo consiguioacute en parteraquo (Serrano y Sanz 268 65) Hija del licenciado e ilustre jurista Pedro Garciacutea Yaacute-ntildeez y de dontildea Catalina de la Fuente ingresoacute contra su voluntad en el monasterio de las Clarisas de Santa Isabel de los Reyes (Toledo) el 5 de agosto de 1570 (Trevintildeo 46) hay que decir que eacutesta no seraacute la uacutenica voluntad contra la que tuvo que luchar

Sor Jeroacutenima se embarcoacute para Meacutexico y de alliacute partioacute hacia Manila junto con siete compantildeeras en el famoso laquoGaleoacuten de Manilaraquo que saliacutea anualmente del puerto mexi-cano de Acapulco Su viaje a las Filipinas duroacute un antildeo y tres meses desde su salida de Espantildea tiempo en el que demostroacute un gran valor y determinacioacuten por el soacutelo hecho de

141 Manuel Serrano y Sanz Apuntes para una biblioteca de escritoras espantildeolas desde el antildeo 1401 al 1833 vols 268 269 270 271 Biblioteca de Autores Espantildeoles (Madrid Atlas 1975) 268 19

162 JUAN FRANCISCO MAURA

embarcarse en tan precarias naves Fue la primera misionera de Oceaniacutea muriendo en Manila en 1621 Alliacute fundoacute el monasterio de Santa Clara que perviviriacutea hasta ser bom-bardeado en la Segunda Guerra Mundial (Trevintildeo 47) Escribioacute su Vida donde trata de la fundacioacuten del convento y de todas las tribulaciones mdashllegoacute a ser excomulgadamdash y satisfacciones que una vida dedicada a una causa justa proporciona Tambieacuten escribioacute una obra de caraacutecter filosoacutefico-teoloacutegico titulada Carta de marear en el mar del mundo nombre alegoacuterico que da cuenta de la enorme distancia recorrida a traveacutes del laquomar del espiacuterituraquo por sor Jeroacutenima He aquiacute algunos de sus versos de caraacutecter religioso

Vuestra soy para vos naciacuteiquestQueacute mandaacuteis hacer de miacute Inaccesible grandezaEterna Sabiduriacuteay bondad del alma miacuteaDios un ser poder y Altezamirad la suma pobrezade eacutesta que se ofrece aquiacuteiquestQueacute mandaacuteis hacer de miacute (Serrano y Sanz 268 66)

Ya en Meacutexico tenemos otro ejemplo de una mujer dedicada por completo a Dios y al estudio y composicioacuten de obras de caraacutecter teoloacutegico Dontildea Ana Mariacutea del Costa-do de Cristo nacida en la ciudad de Tlaxcala hacia el antildeo 1650 Tomoacute la orden de San Francisco para consagrarse a las labores de su orden y a la escritura Se dice que con los escritos de Dontildea Ana Mariacutea se podriacutean formar veinte tomos (Serrano y Sanz 268 282) Estas son algunas de sus obras Vida y muerte de Jesucristo Nuestro Sentildeor Vida del Seraacutefico Padre San Francisco de Asiacutes Vida de la iacutenclita Virgen Santa Clara Vida del sutiliacutesimo doctor Juan Duns Escoto

Pero no todas las monjas tuvieron vidas tan dedicadas al estudio y la oracioacuten Loacutegica-mente entre un nuacutemero tan grande de mujeres existioacute de todo y seriacutea un error pensar que todos los conventos femeninos estaban integrados por laquocaacutendidas palomasraquo Una monja en el siglo XVI y XVII teniacutea mucha maacutes fuerza que una mujer ordinaria ya que actuaban en grupo y la entrada a los recintos donde viviacutean estaba permitida solo a mu-jeres Esta situacioacuten las haciacutea mucho maacutes fuertes a todos los niveles que una mujer sola protegida uacutenicamente por su familia laquoLas monjas durante los siglos XVI y XVII lucharon por eludir la clausura y por zafarse del control que los frailes de las secciones masculi-nas de sus congregaciones ejerciacutean sobre ellasraquo (Vigil 230) Soacutelo un antildeo maacutes tarde que dontildea Ana Mariacutea del Costado de Cristo en 1651 y a 12 leguas de Meacutexico nacioacute la sin par Sor Juana Ineacutes de la Cruz hija de don Pedro Manuel de Asbaje natural de Vergara (Vizcaya) y de Dontildea Isabel Ramiacuterez de Santillana hija de espantildeoles (Serrano y Sanz 268 289) Por ser sin lugar a dudas la poeta maacutes importante de su tiempo y probable-mente la maacutes conocida del mundo hispano no profundizaremos en ella Su obra es un canto a la inteligencia y el exponente maacutes destacado de la literatura barroca americana tanto en prosa como en verso Destacareacute simplemente que Sor Juana Ineacutes pese a vivir en un sociedad donde no eran excesivas las libertades concedidas a las mujeres tuvo el caraacutecter y la determinacioacuten de dejarnos las maacutes bellas poesiacuteas amorosas que si bien estuvieron enmarcadas en un ambiente religioso como era de esperar por su condicioacuten

163ESPANtildeOLAS DE ULTRAMAR EN LA HISTORIA Y EN LA LITERATURA

pudieron transcender como unas de las maacutes bellas manifestaciones literarias que hoy en diacutea se conservan Fue su agudeza mental sensibilidad y cultura tal que no fueron suficientes los soacutelidos muros del convento para contener el genio de tan extraordinaria mujer Recordemos sus conocidiacutesimos versos en defensa de las mujeres

Hombres necios que acusaacuteisa la mujer sin razoacutensin ver que sois la ocasioacutende lo mismo que culpaacuteis142

Las metaacuteforas y la delicadeza que emplea en rebatir a su obispo en su laquoRespuesta a sor Filotea de la Cruzraquo no son solamente el epiacutetome del feminismo de su tiempo sino una de las maacutes brillantes manifestaciones del barroco hispano Poesiacutea teatro ensayo y un conocimiento extraordinario de las ciencias claacutesicas de su tiempo hacen de esta mujer un ejemplo extraordinario de las letras universales Ya son cientos los artiacuteculos y libros que se han escrito sobre Sor Juana y no dejan de aparecer tesis doctorales sobre los maacutes diversos temas conectados con la citada autora143 Como nos dice Stephanie Merrim en su documentada obra Early Modern Womenrsquos Writing and Sor Juana Ineacutes de la Cruz

She wrote and published on secular themes as atypical for a nun as human love Her remarkably extensive writings essayed and reenacted most of the (male) poetic dramatic theological and even philosophi-cal discourses of her times in the metropolis making her works a com-pendium of baroque culture in its diversity and syncretism Sor Juana self-creation as a learned women effectively toppled many of the walls in which she was materially enclosed and positioned her within the dynamic world of early modern European culture (xii)

No se debe dejar de mencionar a otras escritoras novohispanas de la eacutepoca que aun-que no fueron tan proliacuteficas y relevantes como Juana Ineacutes de la Cruz dejaron testimo-nio de algunos acontecimientos que tienen intereacutes socioloacutegico o testimonial Este es el caso de Dontildea Mariacutea Estrada Medinilla de igual nombre y apellido que la mujer que acompantildeoacute a las tropas de Corteacutes en su primera entrada a Meacutexico Natural de Meacutexico publicoacute toda su obra a mediados del siglo XVII concentraacutendose principalmente en la lle-gada del Marqueacutes de Villena virrey y capitaacuten general de la Nueva Espantildea a la ciudad de Meacutexico en el antildeo 1640 Escrita en octavas reales la obra trata de las fiestas de toros y cantildeas con que se obsequioacute al citado virrey Fue impresa en Meacutexico en 1641 (Serrano y Sanz 269 402)

Mucho maacutes importante para el presente libro es Dontildea Isabel de Guevara que escribioacute en 1556 la carta en que se expone la ayuda que ofrecieron las mujeres en el descubri-miento y conquista del Riacuteo de la Plata No cabe la menor duda de que esta carta es uno

142 Para una mejor comprensioacuten del caraacutecter de esta excepcional mujer veacutease entre los numeros trabajos publicados Fredo Arias de la Canal Intento de psicoanaacutelisis de Juana Ineacutes y otros ensayos sorjuanistas (Meacutexico Frente de Afirmacioacuten Hispanista 1972) 47

143 Veacuteanse entre otros trabajos Octavio Paz Sor Juana Ineacutes de la Cruz o las trampas de la fe Georgina Sabat de Rivers En busca de Sor Juana Margo Glantz Sor Juana la comparacioacuten y la hipeacuterbole Gerard C Flynn Sor Juana Ineacutes de la Cruz Stephanie Merrim Feminist perspectives on Sor Juana Ineacutes de la Cruz Pamela Kirk Sor Juana Ineacutes de la Cruz religion art and feminism

164 JUAN FRANCISCO MAURA

de los documentos maacutes importantes con que contamos en relacioacuten a la aportacioacuten fe-menina en el proceso de la conquista de Ameacuterica Su importancia viene dada por varios factores Primero es uno de los primeros testimonios mdashsi no el primeromdash en donde se expone abiertamente la indispensable colaboracioacuten de las mujeres en el descubrimien-to y conquista de tierras en el Nuevo Mundo laquoQue si no fuera por ellas todos fueran acabadosraquo En segundo lugar la informacioacuten vertida en estas liacuteneas presenta en parte la manera de pensar de una mujer espantildeola en tales circunstancias Extraordinario tes-timonio de primera mano que nos da una idea de lo que significoacute en muchos casos el valor y entrega constantes de muchas de estas mujeres que auacuten a riesgo de perder sus vidas no dudaron en luchar al lado de los hombres por una causa que consideraban laquocomuacutenraquo

La relevancia histoacuterica de dicha carta hace que merezca ser transcrita en su totali-dad

Carta de dontildea Isabel de Guevara a la princesa gobernadora dontildea Juana exponiendo los trabajos hechos en el descubrimiento y conquista del Riacuteo de la Plata por las mujeres para ayudar a los hombres y pidiendo repartimiento

para su marido Asuncioacuten 2 de julio de 1556

Muy alta y muy poderosa sentildeora

A esta provincia del Riacuteo de la Plata con el primer gobernador de ella don Pedro de Mendoza hemos venido ciertas mujeres entre las cuales ha querido mi ventura que fuese yo la una y como la armada llegase al puerto de Buenos Aires con mil quinientos hombres y les faltase el bastimento fue tamantildea el hambre que a cabo de tres meses murie-ran los mil esta hambre fue tamantildea que ni la de Jerusalem se le puede igualar ni con otra ninguna se puede comparar Vinieron los hombres en tanta flaqueza que todos los trabajos cargaban de las pobres mu-jeres asiacute en lavarles las ropas como en curarles hacerles de comer lo poco que teniacutean limpiarlos hacer centinela rondar los fuegos armar las ballestas cuando algunas veces los indios les veniacutean a dar guerra hasta cometer a poner fuego en los versos y a levantar los soldados los que estaban para ello dar arma por el campo a voces sargentean-do y poniendo en orden los soldados porque en este tiempo como las mujeres nos sustentamos con poca comida no habiacuteamos caiacutedo en tanta flaqueza como los hombres Bien creeraacute V A que fue tanta la so-licitud que tuvieron que si no fuera por ellas todos fueran acabados y si no fuera por la honra de los hombres muchas maacutes cosas escribiera con verdad y los diera a ellos por testigos Esta relacioacuten bien creo que la escribiraacuten a V A maacutes largamente y por eso cesareacute Pasada esta tan peligrosa turbunada determinaron subir el riacuteo arriba asiacute flacos como estaban y en entrada de invierno en dos bergantines los pocos que quedaron vivos y las fatigadas mujeres los curaban y los miraban y les guisaban la comida trayendo la lentildea a cuestas fuera del naviacuteo y animaacutendolos con palabras varoniles que no se dejasen morir que presto dariacutean en tierra de comida metieacutendolos a cuestas en los

165ESPANtildeOLAS DE ULTRAMAR EN LA HISTORIA Y EN LA LITERATURA

bergantines con tanto amor como si fueran sus propios hijos Y como llegamos a una generacioacuten de indios que se llaman tinbues sentildeores de mucho pescado de nuevo los serviacuteamos en buscarles diversos modos de guisados porque no les diese en rostro el pescado a causa de que lo comiacutean sin pan y estaban muy flacos Despueacutes determinaron subir el Paranaacute arriba en demanda de bastimento en el cual viaje pasaron tanto trabajo las desdichadas mujeres milagrosamente quiso Dios que viviesen por ver que en ellas estaba la vida de ellos porque todos los servicios del naviacuteo los tomaban ellas tan a pechos que se teniacutea por afrentada la que menos haciacutea que otra sirviendo de marear la vela y gobernar el naviacuteo y sondar de proa y tomar el remo al soldado que no podiacutea bogar y escotar144 el naviacuteo y poniendo por delante a los soldados que no se desanimasen que para los hombres eran los trabajos verdad es que a estas cosas ellas no eran apremiadas ni las haciacutean de obliga-cioacuten ni las obligaba si solamente la caridad Asiacute llegaron a esta ciudad de la Asuncioacuten que aunque ahora estaacute muy feacutertil de bastimentos en-tonces estaba de ellos muy necesitada que fue necesario que las muje-res volviesen de nuevo a sus trabajos haciendo rosas con sus propias manos rosando y carpiendo y sembrando y recogiendo el bastimento sin ayuda de nadie hasta tanto que los soldados guarecieron de sus fla-quezas y comenzaron a sentildeorear la tierra y adquirir indios e indias de su servicio hasta ponerse en el estado en que ahora estaacute la tierra He querido escribir y traer a la memoria de V A para hacerle saber la ingratitud que conmigo se ha usado en esta tierra porque al presente se repartioacute por la mayor parte de los que hay en ella asiacute de los anti-guos como de los modernos sin que de miacute y de mis trabajos se tuviese ninguna memoria y me dejaron de fuera sin me dar indio ni ninguacuten geacutenero de servicio Mucho me quisiera hallar libre para me ir a presen-tar delante de VA con los servicios que a SM he hecho y los agravios que ahora se me hacen mas no estaacute en mi mano porque estoy casada con un caballero de Sevilla que se llama Pedro de Esquivel que por servir a SM ha sido causa que mis trabajos quedasen tan olvidados y se me renovasen de nuevo porque tres veces le saqueacute el cuchillo de la garganta como allaacute VA sabraacute A que suplico mande me sea dado mi repartimiento perpetuo y en gratificacioacuten de mis servicios [en el origi-nal del AHN Diversos doc 141 dice ademaacutes mande que sea proveydo mi marido de alguacuten cargo conforme a la calidad de su persona pues el de su parte por sus servicios lo merece] lo merece Nuestro sentildeor acre-ciente su Real vida y estado por muy largos antildeos De esta ciudad de la Asuncioacuten y de julio 2 1556 antildeosServidora de V A que sus Reales manos besa

Dontildea Isabel Guevara

144 Sacar agua de un riacuteo acequia o presa

166 JUAN FRANCISCO MAURA

Sobremdash A la muy alta y muy poderosa sentildeora Princesa dontildea Joana Gobernadora de los reinos de Espantildea etc ndash En su Consejo de Indias (Isabel de Guevara 619-21)

Iroacutenicamente la carta teniacutea que llegar a manos de la desdichada heredera del trono de Castilla e hija de los Reyes Catoacutelicos Juana laquola Locaraquo que habiacutea muerto el antildeo an-terior Son profeacuteticas las palabras de esta mujer no soacutelo porque sus hechos personales quedasen en el olvido sino porque incluso se ha borrado la historia de las mujeres en el Nuevo Mundo negando su presencia Por lo menos Isabel Guevara tuvo acceso a una pluma iquestCuaacutentas seriacutean las que ni siquiera sabriacutean escribir

Otra contemporaacutenea fue dontildea Leonor de Iciz que vivioacute durante la segunda mitad del siglo XVI Interesa sobre todo por los sonetos que escribioacute en elogio de Ercilla soldado que participoacute en la conquista de Chile y que se inmortalizoacute con su obra La Araucana (Serrano y Sanz 269 534) Lo mismo hizo Dontildea Bernarda Lintildeaacuten en 1610 autora de otro soneto en memoria del capitaacuten Gaspar Peacuterez de Villagraacute que participoacute en la conquista de Nuevo Meacutexico (Serrano y Sanz 270 14) Los escritos de estas mujeres tratan de de dos de las eacutepicas maacutes dramaacuteticas de la conquista

En el Peruacute y en pleno siglo XVII aparece otra fundadora de conventos Sor Bernardina de Jesuacutes que ademaacutes fue comparada con Santa Teresa por la semejanza de sus laquocartasraquo con las de la santa de Avila Fue fundadora del convento de Tacunga en Quito maacutes tarde destruiacutedo por un terremoto Dice Serrano y Sanz con respecto a su biografiacutea un tanto legendaria que fue carmelita descalza de Lima y hermana de Dontildea Mariacutea Benavides y Esquivel abuela de D Pedro de Peralta Barnuevo (Serrano y Sanz 269 553) Dicen que esta santa se alimentoacute durante treinta antildeos con laquochochos y caacutescaras de naranja hecho tan raro como increiacuteble Cuando fallecioacute reparaban las monjas en ponerle una vara de azucenas porque habiacutea sido casada y aquellas flores aparecieron milagrosamente sobre el cadaacuteverraquo (Serrano y Sanz 269 553)

Otra limentildea del primer cuarto del siglo XVII con reputacioacuten de santa fue Dontildea Luisa Melgarejo En este caso no se trata de una religiosa de oficio sino de la mujer del doctor Juan de Soto La uacutenica diferencia es que dontildea Luisa al parecer teniacutea laquovisiones y reve-lacionesraquo lo que debioacute poner nervioso a maacutes de un miembro del tribunal del laquoSanto Oficioraquo que consideraron sus escritos laquoculpadosraquo De su papel de laquosantaraquo pasa por lo tanto al de laquoposesaraquo o laquoendemoniadaraquo El inquisidor de Lima Gaitaacuten escribioacute un infor-me donde a traveacutes de la opinioacuten puacuteblica y de otras averiguaciones se deciacutea que dontildea Luisa Melgarejo laquomujer santaraquo sabiacutea cuando las almas de los difuntos saliacutean del Purga-torio El diacutea 14 de noviembre de 1623 se decidioacute tomar posesioacuten de todos los cuadernos en los que habiacutea escrito las experiencias de todos sus laquoarrobos suspensiones extasis y revelacionesraquo Estos cuadernos una vez recogidos presentaron toda una serie de al-teraciones borrones adiciones enmiendas incluso diferente letra por lo que despueacutes de haber sido examinados resultaron culpables145 Excelente imaginacioacuten debioacute tener dontildea Luisa Melgarejo la suficiente al parecer para convencer a algunos miembros de la iglesia de que en sus escritos laquohabiacutea algoraquo que mereciacutea la pena Estas cosas ocurriacutean en Lima uno de los centros culturales maacutes importantes de la vida social y poliacutetica en la Ameacuterica espantildeola Lima a comienzos del siglo XVII seguacuten el empadronamiento llevado

145 Serrano y Sanz 270 47 Veacutease J T Medina Historia del tribunal del Santo Oficio de la Inquisicioacuten de Lima (1569-1820) (Santiago Imprenta Gutemberg 1887) Tomo II 34-41

167ESPANtildeOLAS DE ULTRAMAR EN LA HISTORIA Y EN LA LITERATURA

a cabo en 1614 por el marqueacutes de Montesclaros era una ciudad de 25000 habitantes de los que 11000 eran espantildeoles El nuacutemero de religiosos y religiosas llegaba a 1720 (Pittaluga 77)

Se sabe que en la Isla de Santo Domingo durante el siglo XVI nacioacute o al menos resi-dioacute una poeta de ceacutelebre apellido en los aconteceres del Nuevo Mundo Dontildea Elvira de Mendoza de la que se conserva un manuscrito en la Real Academia de la Historia laquoCantares miacuteos que estaacuteis rebeladosraquo Eugenio de Salazar hace un elogio de ella como poeta en un Soneto a la ilustre Poeta y Sentildeora Dontildea Elvira de Mendoza moradora en la ciudad de Santo Domingo (Serrano y Sanz 270 53)

Nacida en Burgos sobre el antildeo 1590 dontildea Luisa de Padilla merece un lugar aparte dentro del grupo de mujeres escritoras de su eacutepoca Por su estilo faacutecil y castizo su no-vedad de pensamientos y su rica erudicioacuten recibioacute el siguiente comentario de Manuel Serrano y Sanz laquoPocas figuras hay en nuestra historia literaria femenil que puedan compararse a esta eminente prosista acaso la maacutes notable de cuantas florecieron en Es-pantildea durante el siglo XVIIraquo (Serrano y Sanz 270 95-96) Este comentario y comparacioacuten deberiacutea ampliarse para que tambieacuten incluyese a laquola historia literaria varonilraquo

Dontildea Luisa fue defensora de la labor que la Inquisicioacuten estaba realizando en la laquolim-piezaraquo de mujeres laquosoldados del demonioraquo que existieron en algunas provincias espa-ntildeolas en aquel tiempo Muchas de las mujeres que combinaban la magia con los po-deres curativos fueron condenadas no solamente por hombres de la Inquisicioacuten sino tambieacuten por mujeres de todas las clases sociales como es el caso de Luisa de Padilla condesa de Aranda En su obra Elogios de la verdad e invectiva contra la mentira preveniacutea contra aquellos que practicaban artes en contra de la religioacuten cristiana La magiacutea negra seguacuten Padilla era la causante de que muriesen casi tantas personas como otras causas naturales habieacutendose descubierto hasta seis mil brujas en Vizcaya y Guipuzcua con-fesando una mujer de un pueblo pequentildeo haber matado con su laquomagiaraquo a ochocientas personas (Perry 31) Eran estos laquomales de ojoraquo y maldiciones seguacuten la autora las causas de que se secasen los pechos de las madres lactantes que se separasen las parejas casa-das y que abortasen las embarazadas (Perry 31)

Si se tiene en cuenta que dontildea Luisa estuvo emparentada con la maacutes rancia aristocra-cia de su tiempo o lo que es lo mismo con algunos de aquellos que en cierta manera dirigiacutean los destinos de Espantildea en aquella eacutepoca (Duques de Lerma Duque de Uceda Marqueacutes de Cueacutellar Conde de Santa Gadea Marqueacutes de Belmonte por citar algunos) se comprenderaacute mejor su identificacioacuten con una institucioacuten que en teoriacutea velaba por la salvaguarda de los valores laquoeternosraquo de una Espantildea destinada a ser la campeona del ca-tolicismo durante los siglos XVI y XVII El padre de dontildea Luisa fue don Martiacuten de Padilla y Manrique extraordinario militar que proboacute su valor contra enemigos moriscos ingle-ses holandeses piratas berberiscos y el renegado genoveacutes Muley Faxad Fue veterano de la batalla de Lepanto donde apresoacute a cuatro galeras y acompantildeoacute con su escuadra a la reina Dontildea Margarita de Austria cuando vino de Geacutenova en 1598 laquoHabiacutea obtenido a 24 de julio de 1587 el tiacutetulo de Conde de Santa Gadea y en 1596 el de Capitaacuten General de la Armada del mar Oceacuteanoraquo (Serrano y Sanz 27095-96)

Por otra parte tambieacuten se sabe que dontildea Luisa participoacute directamente y desde tem-prana edad en la praacutectica de algunas actividades intelectuales como la historia y la arqueologiacutea a la vez que dedicaba su tiempo a virtudes cristianas como la caridad y el socorro de los necesitados (Serrano y Sanz 270 97) Resulta mucho maacutes faacutecil compren-

168 JUAN FRANCISCO MAURA

der la postura ideoloacutegica de esta gran mujer si tienen en cuenta ademaacutes de los factores antes mencionados otros tantos de caraacutecter biograacutefico concernientes a su educacioacuten y matrimonio

Otra escritora fue la mexicana dontildea Mariacutea Casilda Pozo natural de Temestla (Meacutexi-co) Nacida en el mes de abril de 1682 dejoacute escrita su biografiacutea en 16 cuadernos el ma-nuscrito original se encuentra en la biblioteca del colegio de San Gregorio de Meacutexico Fue su confesor el jesuiacuteta Domingo Quiroga que fue quieacuten la incitoacute a escribir su obra (Serrano y Sanz 270 137) Sor Juana de San Antonio aparece a principios del siglo XVII formando parte de un grupo de religiosas espantildeolas que fueron a Manila por la ruta de Meacutexico Ademaacutes de distinguirse por sus cualidades personales su obra interesa por ofrecer informacioacuten testimonial y costumbrista acerca de la forma de vestir de chinos y japoneses (Serrano y Sanz 270 225)

Otra monja esta vez ecuatoriana fue Gertrudis de San Ildefonso Nacida en 1652 profesoacute su vocacioacuten en el convento de Santa Cruz de Quito dejando escrita su vida por mandato de su confesor el padre Martiacuten de la Cruz el cual hizo una biografiacutea laquoen tres gruesos voluacutemenesraquo Gertrudis de San Ildefonso murioacute en 1709 (Serrano y Sanz 270 300) en olor de santidad

Sor Mariacutea Ana Agueda de San Ignacio nacioacute el 3 de marzo de 1695 en la dioacutecesis de la puebla de los Angeles en un rancho del lugar de Santiago Tecaliacute (Serrano y Sanz 270300) Esta monja mexicana escribioacute varias obras durante su vida conventual a lo largo de la cual desempentildeoacute el cargo de priora por muchos antildeos Entre sus obras todas de caraacutecter piacuteo y de laquoamor divinoraquo escribioacute un curioso y laquocopiosoraquo tratado de la Leche virginal de la Soberana Madre de Dios El padre Fr Juan de Villa Saacutenchez hace el siguiente comentario al respecto laquoen que hablando primero en sentido natural de los beneficios que debemos a Nuestra Sentildeora pasa a tratar en sentido miacutestico y alegoacuterico enten-diendo en la leche la doctrinaraquo (Serrano y Sanz 270301) Mexicana fue tambieacuten Sor Petronila de San Joseacute que ejercioacute como abadesa del Real monasterio de Jesuacutes Mariacutea de la ciudad de Meacutexico Escribioacute Vidas de varias religiosas ejemplares obra que tiene su im-portancia ya que al parecer laquoDe esta obra se sirvioacute D Carlos de Siguumlenza y Goacutengora para escribir su Parayso Occidental (Meacutexico 1684) seguacuten eacutel mismo declara en el proacutelogo diciendo lsquoa quien si hay algo bueno en esta historia se le debe todorsquoraquo (Serrano y Sanz 270 354) Menos conocida fue su compatriota Sor Luisa de Santa Catalina natural de Xacona laquopueblo situado en las inmediaciones de Zamora (Meacutexico)raquo siendo bautizada en 1682 Escribioacute Cartas espirituales a su confesor el P Juan Loacutepez de Aguado (Serrano y Sanz 270 361-62)146

Todos estos escritos la mayoriacutea de ellos ignorados por el gran puacuteblico tienen la im-portancia de darnos una perspectiva diferente En otras palabras ensentildearnos la maacutes refinada sensibilidad de muchas mujeres que permanecieron y en su mayoriacutea siguen permaneciendo a laquooscurasraquo de una eacutepoca tan rica de la literatura espantildeola como fue el Siglo de Oro Este siglo fue tambieacuten en su dimensioacuten literaria y artiacutestica patrimonio de la mujer

146 Para profundizar en muchas de estas escritoras hispano-americanas la consulta de la Biblioteca Hispano-Americana de Beristain de Souza resulta de capital importancia

169ESPANtildeOLAS DE ULTRAMAR EN LA HISTORIA Y EN LA LITERATURA

Sor Nada ardores divinos de una monja adolescente escritos ineacutedi-tos de una recieacuten profesa del siglo XVI147

iexclQueacute encantadores son tus amores hermana miacutea espo-sa iexclQueacute deliciosos son tus amores maacutes que el vino Y el aroma de tus perfumes es mejor que el de los baacutelsamos Miel virgen destilan tus labios esposa miel y leche hay en tu lengua y el perfume de tus vestidos es como aroma de incienso (Cantar de los Cantares 4 10-11)

Sor Nada llamada asiacute por humildad seguacuten dice el Indice de manuscritos de la Biblio-teca Nacional de Madrid es uno de los ejemplos maacutes desconocidos e interesantes que tenemos de la poesiacutea y prosa amoroso-religiosa del siglo XVII Hasta la fecha nunca se habiacutea publicado su obra e incluso hasta el antildeo 1995 para mi sorpresa no habiacutea copias microfilmadas de sus manuscritos en la Biblioteca Nacional Serrano y Sanz en su libro Apuntes para una Biblioteca de Escritoras Espantildeolas hace una escueta y pasajera mencioacuten de esta mujer y de su obra (68-69) siendo eso todo lo que hasta ahora se sabiacutea de ella Sus escritos consisten en los siguientes manuscritos

1 laquoEn queacute consiste un verdadero amor de Diosraquo 9 hojas uacutetiles en 4ordm letra del siglo XVII Biblioteca Nacional de Espantildea Manuscrito 1295926

2 laquoPintura del Propio Amorraquo laquoPintura del propio Amorraquo 10 hojas uacutetiles en 4ordm letra del siglo XVII Biblioteca Nacional de Espantildea Manuscrito 1295927

3 laquoEsplicacioacuten sobre en queacute consiste la paz del Almaraquo laquoQuartillas aacute un Alma que padece soledad interiorraquo 7 hojas uacutetiles en 4ordm letra del siglo XVII Biblioteca Nacio-nal de Espantildea Manuscrito 1295828

En cuanto a su persona soacutelo se nos dice que laquose encubrioacute con este seudoacutenimo laquoSor Nadaraquo Esta monja desconocida de origen hispanoamericano posee toda la frescura e ingenuidad de una joven apasionada metida por vocacioacuten u obligacioacuten a ejercer la profesioacuten maacutes comuacuten para mujeres de cierta clase social de su tiempo En sus liacuteneas podemos encontrar un misticismo simple incluso en algunos momentos infantil pero a su vez lleno de una fuerza y sensualidad interior poco comuacuten en escritos de este geacute-nero que desborda los liacutemites del laquoamor divinoraquo a traveacutes de los diaacutelogos entre el Alma y el Esposo Sor Nada consigue proyectar su amor a Dios maacutes allaacute de una experiencia romaacutentica Su experiencia es sincera y genuinamente miacutestica trascendiendo la imita-cioacuten o la propia creacioacuten poeacutetica ficcionalizada (Hatzfeld 30) Algunos pasajes son de un

147 Veacutease mi artiacuteculo Sor Nada ardores divinos de una monja adolescente escritos ineacuteditos de una monja profesa del siglo XVIIraquo Espeacuteculo Revista de estudios literarios 26 (2004) 1-10 Universidad Complutense de Madrid http wwwucmesinfoespeculonumero26sornadahtml

170 JUAN FRANCISCO MAURA

alto contenido eroacutetico con sustantivos y metaacuteforas que recuerdan la maacutes iacutentima unioacuten amorosa en unos casos y el tierno amor maternal en otros

[T]e miro Jesus mio desnudo a las inclemencias del tiempo y ardien-do en puro fuego de Amor por la salud de las Almas y me ensentildeas a que te ame con todo mi corason y puresa de espiritu No atendiendo ni buscando umanos intereses ni a solisitar consuelos ni regalos espi-rituales que suelen empantildear la puresa del noble corason No mi Jesus amable pues antes me ensentildeaste tu puro Amor que desnudo sean [sic] de encaminar mis passos desde el pesebre asta la cuna en donde te miro tan desnudo como el pesebre y todo Sentildeor por mi Amor (Mss 12959 26 hoja 1 v)

El manuscrito (12959 27) de la mencionada serie de tres contiene algunas correccio-nes quizaacute hechas por el confesor o quizaacute por ella misma cuando se dirige con excesiva familiaridad y arrebatado fervor a su Amado148 He escogido el manuscrito (12959 Caja 28) en primer lugar por ser el ejemplo maacutes representativo de su poesiacutea y prosa En este manuscrito encontramos de forma maacutes directa que alegoacuterica toda la frescura de un diaacutelogo entre Jesuacutes y el alma que raya como diriacutea Cervantes laquoa la llana y sin rodeosraquo (667 lib 2 cap 38) con el doloroso y a veces desesperado deseo de la entrega y la unioacuten final con el Amado La ortografiacutea no ha sido corregida respetaacutendose el texto ori-ginal149 Veamos el siguiente fragmento

Mira que te amo con Amor de padre y con Amor de esposo el mas fino y puro enamorado que no tan solo me presio de darte mi mano sino tambien todo mi cuerpo y sangre para que con mi pan de vida te sustentes y te regales a tus anchuras y que con mi propio espiritu vivas en paz como tu lo deseas y que mis amores sean unico alivio en tus trabajos en esta mortal vida pues si esto es asi y sabes que muero por darte vida dime esposa mia de que te fatigas Dame querida tus bras-sos y dime si me amas como yo te amo (Hoja 4)

148 La antologiacutea de Promis ha procurado insertar entre los textos antoloacutegicos algunos que se refieren a la es-critura de mujeres fundamentalmente de aquellos generados en el interior de los espacios conventuales Estos textos se fundan como laquohistorias de vidasraquo y responden casi siempre a los requerimientos de los confesores de las monjas coloniales En este sentido resulta valiosiacutesima la incorporacioacuten de la llamada Relacioacuten autobiograacute-fica de Sor Ursula Suaacuterez como una muestra significativa de la escritura monjil entendida en esta eacutepoca (como tambieacuten en la tradicioacuten europea medieval) inserta en las denominadas laquolabores de manoraquo de las religiosas ya que el texto escrito por mandato se convertiacutea en una suerte de entramado o tejido linguumliacutestico es decir en un nuevo bordado que la mayor parte de las veces el confesor convertido en censor iba haciendo tachando y enmendando En la antologiacutea Promis agrega un texto de Sor Tadea Garciacutea de la Huerta titulado Relacioacuten de la inundacioacuten que hizo el riacuteo Mapocho de la ciudad de Santiago de Chile en el monasterio de Carmelitas titular de San Rafael el diacutea 16 de junio de 1783 se trata de un poema tipo romance escrito en versos octosilaacutebicos y que da cuenta de lo sucedido ese diacutea en el convento (Resentildea de la literatura del reino de Chile de Joseacute Promis Eddie Morales Pintildea httpwwwupaclpublicaciones2002literatura_promishtm)

149 Son frecuentes las faltas ortograacuteficas Una de ellas es el uso constante del seseo La ausencia de acentua-cioacuten y puntuacioacuten exceptuando alguacuten punto o coma arbitrario no seguido casi nunca de mayuacutescula inicial lo mismo que el uso igualmente aribitrario de la h o de b v r q g j m n x etc No olvidemos de la misma forma la laxitud linguumliacutestica existente en el siglo XVII (no sabemos a queacute parte de eacuteste pertenece el manuscrito) asiacute como la joven edad de la monja

171ESPANtildeOLAS DE ULTRAMAR EN LA HISTORIA Y EN LA LITERATURA

Los versos del presente manuscrito poseen la misma fuerza que tiene su prosa Con una estructura estroacutefica indefinida estaacuten aparentemente corregidos por alguien que tu-vo la oportunidad de conocer personalmente a la autora Muy probablemente se trate del padre al que hace referencia al principio del primer manuscrito laquoMandame el Pd que le declare en que consiste un verdadero amor a Diosraquo a continuacioacuten continuacutea con su caracteriacutestica humildad laquo[O]bedesere y dire lo q Dios me inspire segun mi rudesa y simplisidadraquo (Mss 12959 26) En cuanto a la fuerza pasional de esta joven observamos con cierta tristeza coacutemo aparece sublimada en sus escritos con toda la enegiacutea de una joven mujer llena de intensidad y vida pero encerrada en los liacutemites de un convento Veamos un ejemplo en donde responde el Alma en los siguientes versos

O mi enamorado Jesus O mi dulse y tierno amanteO alegria de los sielos O dulse Jesus amable

(Toda Sentildeor me derrito toda Sentildeor me desagoy quiero vivir por ti ea sentildeor abrasadme) [Tachado en el original]

Toda Sentildeor me derrito toda Sentildeor me desagoy quiero morir por vos ea Sentildeor que ya acabo

Ya tus amores me llaman ya tus perfumes me traencon suspiros y agonias Sentildeor hasta que te alcanse

O mi Jesus amoroso no puedo mas dilatarmeya la pasiensia me falta dulse Jesus abrasadme

(No puedo vivir sin vos no puedo mas dilatarmeya la pasiensia me falta dulse) [Tachado en el original]

No puedo vivir sin vos mi dulse Jesus amablepues me teneis echisada siendo mi esposo y mi Padre

Ay que me abraso Ay que me quemo del Amor deJesus nasareno como no tocan y tantildeen a fuego150

Estos versos llenos de arrebato sublimado conectan con toda la tradicioacuten miacutestica es-pantildeola que se remonta a Ramoacuten Llul y que culmina en el maacutes universal de nuestros

150 En toda la fuerza y simbologiacutea del amor maacutes iacutentimo del maacutes alto y sublime placer de la unioacuten de los amantes tal como lo encontramos en el Cantar de los Cantares y en San Juan de la Cruz Leemos en la Biblia

Ya me he quitado la tuacutenica iquestCoacutemo volver a vestirme Ya me he lavado los pies iquestCoacutemo volver a ensuciarlosMi amado metioacute su mano por el agujero (de la llave) y mis entrantildeas se estremecieron por eacutel Me levanteacute para abrir a mi amado Mis manos destilaron mirra y mis dedos mirra exquisita en el pestillo de la cerradura (5 3-5)

Nos ocurre lo mismo con San Juan de la Cruz en su insuperable poema laquoLlama de amor vivaraquo

iexclOh cauterio suaveiexclOh regalada llagaiexclOh mano blanda iexclOh toque delicadoque a vida eterna sabey toda deuda pagaMatando muerte en vida la has trocado

172 JUAN FRANCISCO MAURA

miacutesticos San Juan de la Cruz Esta tradicioacuten se extiende hasta finales del siglo XVII esto es hasta los finales del Barroco siendo un poco maacutes tardiacuteo en la Ameacuterica espantildeola Sin tener como propoacutesito discutir en el presente trabajo a queacute corriente miacutestica pertenece la obra de Sor Nada es necesario resaltar no obstante el hecho de que estaacute escrito por una mujer y ademaacutes de tierna edad El manuscrito 12959 Caja 26 termina con estas pa-labras laquo[T]odas estas boverias escrivi por entretenimiento siendo resien profesa en la religion Sor Nadaraquo Mas no por la juventud de su autora los escritos dejan de tener lo-gradas metaacuteforas imaacutegenes y siacutembolos sacados de la naturaleza La alegoriacutea de la unioacuten matrimonial poseeacute el fuego liacuterico de la maacutes apasionada de las relaciones amorosas vivi-ficada por perfumes flores insectos animales escarchas nieves o abrojos Por lo tanto aunque la narracioacuten destile cierta ingenuidad no carece por ello de un vocabulario rico con el sabor popular de la poesiacutea de los cancioneros y romances de tradicioacuten renacen-tista No ha sido otra mi intencioacuten que la de rescatar del olvido unos escritos en prosa y en verso llenos de frescura y espontaneidad que nos muestran la pasioacuten con que la joven novicia se laquoentrega en cuerpo y almaraquo a los menesteres de su profesioacuten guiada por un padre espiritual en esos primeros antildeos de formacioacuten Esta ha sido la razoacuten por la que presento a continuacioacuten el citado manuscrito en su totalidad

Sor Nada (Mss 1295928)

laquoEsplicacion sobre en que consiste la paz del AlmaraquolaquoQuartillas a un Alma que padece soledad interiorraquo

[7 hojas utiles en 4ordm letra del siglo XVII]

+

Esplicacion sobre en que consiste la paz del Alma

Pareseme segun mi rudo entender que la verdadera paz del Alma con-siste en una muy pura y buena consiencia en un corason liso y bien intensionado en una verdadera rectitud de espiritu en el qual el Alma procura bolar a Dios sin jamas detenerse a respetos umanos ni reparar en que me diran ni de que me censuraran sino me apresuro a seguir a unos entenderes y pareseres dorados en los quales pretende el mundo engantildear y ensuciar si se puede la puresa de un corason unicamente de Dios y de su Santa ley y se lo conserva cristalino con la divina asis-tencia de la gracia y comprendido de su Amor y temor siguiendo la luz divina de tan amante Sentildeor Dios y ombre verdadero con que este ilustrado corason ni se altera ni se mueve por los disfrasses dorados que ase el mundo y sus moradores mayormente con falssas amistades aunque con ellos muestre buena intension Con la misma grasia y luz de Dios conose el buen corason estos disfrasses que le ase el mundo y se retira de todo con espiritu y valor esto sin la menor alterasion sino que en suma paz se retira a buscar a Dios dentro de su mismo corason

173ESPANtildeOLAS DE ULTRAMAR EN LA HISTORIA Y EN LA LITERATURA

y se abrasa con su pura verdad en la qual se le descubren mil interio-res secretos tan solidos puros y verdaderos que la misma Alma queda abismada y de puro grandes no los puede bien comprender ni esplicar pero estos mismos secretos divinos le sirven de espuelas para no solo correr sino bolar con pies de plumas en seguimiento de su bien ama-do Jesus y como este soberano Sentildeor es tan amante de sus espossas las Almas luego que la ve bolar con pies de plumas la sale al encuen-tro en despoblado campo que se deve de llamar Campo de Amor de Dios y el mismo Sentildeor se viene a las manos por ser Dios que nos ama con Amor infinito de Padre benigno y amoroso con que asiendose en contra deso este divino enamorado en lo interyor de el Alma que le busca con ansias de servirle y amarle y en aquella soledad traban una conversasion amorosa y sensilla como la pluma simple de quien esto escrive

Divino enquentroDios y el Alma en la soledad

O Soberano Principe de la paz dise el Alma tus perfumes me traen a ti bolando porque alla en el mundo y sus valedores me pretendian engantildear y entretenerme con pegaminossas amistades que facilmen-te me pudieran envenenar y matarme apartandome de ti Mi dulse Jesus amable mi Redentor Soberano que con tantas ansias me sales al enquentro como siervo [ciervo] erido de mis Amores los quales tu Amor me ofrese para que con tu mismo Amor te ame y te sirva en paz sin perturbarme ni contristarme ni cansarme de padeser pasando si se ofrese por escarchas nieves espinas ni abrojos ni por otros diverssos trabajos ni piedras de contradision que tu me puedes permitir pues por mas que el mar se levante con sus ferosses olas contra mi ni piedras se me tiren al rostro en todo Sentildeor me quieres con serenidad pasifica sin la menor perturbasion Todo Sentildeor quieres que lo tome con Serenidad de espiritu y asi vengo a ti bolando para que mejor me ensentildees a vivir segun las leyes de tu noble condision que me son muy agradables por mas que el mundo me las despresie por segir sus vanidades y torsidas intensiones con apariensias de bien y con este engantildeo y bien me quie-ro mas a mi que no a mi proximo veo que segun mi pareser se pierden muchas Almas y tambien de aquellos que se depresian y pasan por muy espirituales Con que me paresen pocos los que llegan a padeser con desnudes151 de espiritu por tu purisimo Amor y me parese essas se quedan muy atrasadas en la virtud por el peligro de bolver muy atras el paso de modo que se pueden despentildear y pereser en su misma desgra-sia ya por soberbia o por otras enfermedades que se les pega al corason y asi lo pasan como siegos ignorantes sin advertir en sus peligros

151 La letra en cursiva es miacutea

174 JUAN FRANCISCO MAURA

este aquerdo Sentildeor y otros que tu verdad me ensentildea me ase venir uyendo de las paredes del mundo y me vengo a ti Dios mio bolando con las dos Alas del Amor y temor que tu mismo Amor me ofrese tan de gracia y tan de grado que no se duentildeo mio con que lo responder a tan soberano beneficio y finesa de tus entrantildeas de Amorvengo Sentildeor y esposo mio unicamente a descansar en ti pues los peli-gros del camino me an puesto en mucho sobresalto temiendo el per-derte y sin ti perderme para siempre por una eternidad sin fin pues deseo amado mio ganarme ganandote a ti y vivir en ti aora en vida y despues eternamente y estos cuidados me traen fatigada molida y cansada y no podre tener alivio y descanso sino viendome entre tus brassos aunque sea estando en cruz pues ese es el fin de mis deseos vivir y morir en ti ablame mi cordero manso y ensentildeame a que ver-daderamente te ame como fiel esposa ea mi caro amigo dame la ma-no pues sabes Amor mio que en mi no ay mano sin tu misma mano y asi mi Dios y Sentildeor mi Principe Soberano con umilde rendimiento y deseos de alcansarte te suplico me des la mano y me consueles en estos mis trabajos Deseo Sentildeor vivir en paz y los malos amores de mi Naturaleza flaca no me dejan detentar y no quieren por mi desgrasia atropellar con las leyes de tu Amor ni quisiera perturbar mi corason quando me veo con un torvellino de olas y contratiempos que a menu-do me suelen sercar pero si tu Sentildeor me das la mano nada temo sino que me aseguro y vivire en paz sin que me fatiguen los contratiempos pues mi mano en la tuya y mi espiritu en el tuyo por mas borrascas que me envistan no seran bastantes para rendir mi voluntad a la suya bien si para pronunsiar un fiat que resuene bien atras en tus oidos y que en medio de mis fatigas me ponga a cantar tus divinas misericor-dias hea Sentildeor ya pretendo serrar mis labios por no desir mas bove-rias y deseo Sentildeor oir tus palabras de vida eterna abla Sentildeor que tu sierva oye con atension y cuydado mira mi Dios que se me ase tarde y espero con prisa deseando saborearme y aprovecharme de los ecos de tu Santa dotrina pues todas tus palabras saben a eterna vida callen pues mis sentidos y potensias y todo se ponga en paz pues mi dulse y soberano Sentildeor no se escusara de ablar me aun que en mudo silensio hea mi gran Prinsipe de la paz ablame que tus puros amores me traen perdida por estos asperos montes y mis cortos pasos no te pueden dar alcanse mirame mi Dios a tus pies postrada como un vil gusano y me-nor ormiga de la tierraabla Jesus y dise a su esposa el Alma querida esposa mia que me pides y por que te muestras tan fatigada y mal sufrida no vives como corde-rita del campo buscando de mis pechos el sustancial pasto mi Amor no te sustenta y mi grasia te promete eterna vida pues dime amada de que te fatigas y te muestras mal sufrida mira que te amo con Amor de padre y con Amor de esposo el mas fino y puro enamorado que no tan solo me presio de darte mi mano sino tambien todo mi cuerpo y

175ESPANtildeOLAS DE ULTRAMAR EN LA HISTORIA Y EN LA LITERATURA

sangre para que con mi pan de vida te sustentes y te regales a tus an-churas y que con mi propio espiritu vivas en paz como tu lo deseas y que mis amores sean unico alivio en tus trabajos en esta mortal vida pues si esto es asi y sabes que muero por darte vida dime esposa mia de que te fatigas Dame querida tus brassos y dime si me amas como yo te amoResponde el Alma152 Tu mi Dios sabes si yo te amo pues de mi solo se que mis deseos y ansias buelan a ti mas no alcanso a saber si te amo como tu de-seas ser amado y como desconfio tanto de mi y de mis prosederes falssos temo Dios mio perderme y perderte y asi Sentildeor pues no desechas mis Amores y te muestras tan fino en amarme te pido me ensentildees a vivir segun las leyes de tu pura verdad y fina condisionhija mia dise Dios la prueva de un verdadero Amor consiste en sufrir callar y padeser por mi unico Amor y en todo seguir mis pasos sin ja-mas retroseder por mas fragoso que se muestre el camino pues nunca seran tantas las espinas las escarchas ni las nieves ni los vientos bo-rrascosos que te se ofrescan pasar por mi Amor como los que mi tierno y desinteresado Amor paso por ti y siempre con mis pies descalssos y asi hija y esposa mia muestrate costante en seguir lo perfecto de mis passos pues mi braso fuerte sera en ti y peleara por ti y te sera el todo en tus nesesidades y mi Amor te convertira en dulse y suave lo amargo y molesto a la condision de la carrne

Responde el Alma

O mi enamorado Jesus O mi dulse y tierno amanteO alegria de los sielos O dulse Jesus amable

(Toda Sentildeor me derrito toda Sentildeor me desagoy quiero vivir por ti ea sentildeor abrasadme) [Tachado en el original]

Toda Sentildeor me derrito toda Sentildeor me desagoy quiero morir por vos ea Sentildeor que ya acabo

Ya tus amores me llaman ya tus perfumes me traencon suspiros y agonias Sentildeor asta que te alcanse

O mi Jesus amoroso no puedo mas dilatarmeya la pasiensia me falta dulse Jesus abrasadme

(No puedo vivir sin vos no puedo mas dilatarmeya la pasiensia me falta dulse) [Tachado en el original]

No puedo vivir sin vos mi dulse Jesus amablepues me teneis echisada siendo mi esposo y mi Padre

152 La aparicioacuten de una mayuacutescula al principio de una oracioacuten es algo totalmente arbitrario en este ma-nuscrito dada la libertad ortograacutefica de la autora Como se puede observar en la mayor parte de las veces no es el caso

176 JUAN FRANCISCO MAURA

Ay que me abraso Ay que me quemo del Amor deJesus nasareno como no tocan y tantildeen a fuego

Responde Jesus Hija mia tus simples vozes oygo y aunque resuenan bien a mis oidos pero te deseo mas mansa y pasifica en tus fervores ya sabes que no siempre as de vivir en mantillas ni a los pechos de tu Madre por que es rason que padescas con espiritu fuerte como mu-jer valerosa por que a una esposa del Rey soberano y prinsipe de la paz no le estan bien chiquerias ni fervores de nintildea malcriada y ya es ora que la destete su Madre la Naturaleza y que empesando su nueva vida camine con el favor de mi grasia sigiendo mis passos de eterna vida esto con sus pies descalssos segun mis leyes de Amor puro y desinteresado lo tienen ordenado153 y vivir en paz como lo deje en-cargado a mis apostoles Santos repitiendoles varias vezes Vivir en pas y caridad esto es un vivir en Dios y Dios en el Alma y asi hija mia el Alma que vive en paz vive en mi Como mis cortesanos en el cielo y pues me pides que te ensentildee a vivir segun las leyes de mi condision Repito el desir que te debes mostrar sufrida en todo tiempo y estado sin permitir en tu corason que ni aun los fervores se adelanten con estremos ni ademanes sino atiende y aprende de mi purisima Madre pues siempre la veras si bien lo consideras que mientras vivio en el mundo en todos sus trabajos se mostro firme fuerte costante como piedra diamante Pues mirandome nintildeo entre sus brasos desnudo en el pesebre desnudo y crusificado en los brassos de una cruz En estos y otros passos no se mudo su rostro sino que en suma serenidad y pasifico corason toda se sacrificaba enteramente en los brassos de mi Amor y rendido su corason y voluntad en la de mi eterno Padre por ejemplo te la doy y deseo que aprendas de sus nobles calidades pues te aseguro carisima que las leyes de mi condision y pura verdad todo lo allaras enserrado en el corason de mi purisima Madre sedle fiel y descansaras en paz

+

Quartillas a un alma que padese soledad interior

1Un Alma afligida y tristese ve en un campo desiertay en el su esposo la tieneAtormentada y sedienta

153 Es a traveacutes de estas liacuteneas lo que hace suponer que la autora de este diaacutelogo amoroso entre el Alma y Je-suacutes es novicia esto es laquoque estaacute empesando su nueva vidaraquo En las mismas liacuteneas una vez maacutes se hace alusioacuten al laquodesteteraquo de su vida civil laquoa una esposa del Rey soberano y principe de la paz no le estan bien chiquerias ni fervores de nintildea malcriada y ya es ora que la destete su Madre la naturalesaraquo (fol 5)

177ESPANtildeOLAS DE ULTRAMAR EN LA HISTORIA Y EN LA LITERATURA

2Pendiente se ve en el AyreSolo un hilo la sustentasin tocar el pie en el sueloporque del no tome tierra

3Mirandola esta yto a ytoaquel sol que la atraviesay la enviste con sus rayosmas ella no pestantildeea

4Como sigarra padese y como a tal se atormentabatiendo sus mismas Alasy el corason se atraviesa

5Con penas sustos temoresquando se mira assi mesmasin tener valor en nadaporque es la misma flaquesa

6Pero el Amor de su esposotoda su atension le llevay la pone en un abismopero cubierto en tiniebla

7Desea dar algun bueloy subir con ligeresapero se mira travadacon una fuerte cadena

8Clama suspira y padeseMas del todo se sujetaRindiendo su voluntadA la divina clemencia

9Los enemigos del AlmaCruelmente le asen guerray ella aunque firme y constantelos reselos la atormentan

178 JUAN FRANCISCO MAURA

10de todos modos padeseaunque gosa la asistensiadel divino esposo amadoque en su interior se recrea

11Solo de verla penary con verla tan serenadise resibe mil gustosde su sigarra pequentildea

12Le sabe el mundo a mil yelesy su trato le atormentaviendo en el mil falsedadesque todas saben a tierra

13Para poderse librardeja de correr y buelacon las Alas del Amory el mismo Amor se la lleva

Una vida dedicada a un amor divino un amor que le haraacute llenar un buen nuacutemero de cuartillas dedicadas a tan alta empresa Se desconoce si la vocacioacuten de Sor Nada con-tinuoacute con tanta intensidad el resto de sus diacuteas Ciertamente la vida en el covento no era faacutecil En algunos casos la experiencia era traumaacutetica incluso fatal para algunas de las adolescentes de la Ameacuterica Espantildeola Las reglas del claustro eran severas por varias razones Estas joacutevenes si no teniacutean el permiso de la superiora no podiacutean recibir visitas no podiacutean volver a sus casas su correspondencia era censuraba y no podiacutean salir del periacutemetro conventual Igualmente se levantaban antes del amanecer para oir misa tra-bajaban el resto del diacutea y lo maacutes interesante es que muchas veces esta vida era aceptada por muchas

Page 19: Tercera parte: Mujeres en la vida intelectual - …parnaseo.uv.es/Editorial/Maura/TerceraParte.pdf · La Biblia, por su parte, hace repetidas menciones de la mujer y sobre el comporta-

149ESPANtildeOLAS DE ULTRAMAR EN LA HISTORIA Y EN LA LITERATURA

la presuncioacuten de que la lujuria provocaba que el cerebro emitiese un liacutequido que iba al estoacutemago enfriaacutendolo y debilitaacutendolo interrumpiendo de esta manera las funciones vitales (Perry 58)

Se sabe que en la eacutepoca de Isabel la Catoacutelica habiacutea muchas mujeres estudiantes y que la propia reina las impulsaba a estos menesteres iniciativa que obtuvo sus frutos en las deacutecadas siguientes Ademaacutes de las conocidas novelistas Mariacutea de Zayas y Sotomayor y dontildea Mariana de Carvajal existioacute toda una serie de escritoras de todos los geacuteneros lite-rarios que florecieron a ambos lados del Atlaacutentico y que no solamente llaman la aten-cioacuten por su nuacutemero sino por la calidad de sus obras Algunas de ellas como dontildea Luisa de Padilla condesa de Aranda calificada por Serrano y Sanz como laquola maacutes notable de cuantas florecieron en Espantildea en el siglo XVIIraquo personificaraacuten a la perfeccioacuten a este tipo de mujeres Tambieacuten deberiacuteamos saber cuaacutentas seriacutean las mujeres que escribieron con pseudoacutenimos masculinos

La informacioacuten sobre las diferentes facetas de la vida femenil con que contamos no es abundante A pesar de todo podemos hacernos una idea maacutes clara de la verdadera situacioacuten de la mujer a traveacutes de una nueva interpretacioacuten de los textos tanto de los medievales como de las croacutenicas de los primeros antildeos del descubrimiento y conquista Algunos estudios relativamente recientes surgidos por el intereacutes general que suscita todo lo concerniente a la mujer han ayudado a considerar nuevas perspectivas La eru-dicioacuten moderna estaacute poniendo en tela de jucio los estereotipos tradicionales en cuanto a la pasividad y relevancia femeninas asiacute como al tradicional misogenismo que se atri-buye a la eacutepoca medieval Cada vez estaacute maacutes claro que la existencia de estas mujeres variaba considerablemente seguacuten la eacutepoca posicioacuten social o situacioacuten geograacutefica por lo que hacer valoraciones categoacutericas sobre laquola situacioacuten de la mujerraquo puede llevar a graves equivocaciones (Dillard 9) Es fundamental para comprender a la mujer espa-ntildeola que pasoacute al Nuevo Mundo tener en cuenta las enormes diferencias de todo tipo que existieron en la sociedad castellana y novomundista Un pintoresco ejemplo es el de laquolas tapadasraquo una usanza de origen aacuterabe que se pondriacutea de moda en Castilla poco despueacutes de la toma de Granada por los Reyes Catoacutelicos y que despueacutes pasariacutea al Peruacute Esta tradicioacuten ha perdurado en algunos pueblos de Espantildea hasta relativamente poco tiempo pueblos como Mojaacutecar (Almeriacutea) y Vejer de la Frontera (Caacutediz) son ejemplo de esta costumbre tambieacuten conocida como el de las laquocobijaacutesraquo

Tras la caiacuteda del reino musulmaacuten de Granada en 1492 la corona espa-ntildeola prohibioacute a las mujeres aacuterabes de Andaluciacutea vestir los velos islaacutemi-cos que cubriacutean sus rostros y ocultaban su identidad No era faacutecil des-arraigar esta costumbre tan ancestral y secular y el emperador Carlos asiacute como su hijo el rey Felipe II tuvieron que repetir la prohibicioacuten Cuando finalmente las moras fueron obligadas a abandonar sus velos y a adoptar el chal castellano comenzaron a utilizar la nueva prenda para cubrir sus rostros dejando al descubierto soacutelo uno de los ojos Esta nueva moda en el uso del chal tradicional nos asegura leoacuten Pi-nelo era extremadamente graciosa sensual y atractiva a causa de la belleza exoacutetica de los ojos de las moras Las mujeres cristianas de Granada Coacuterdoba y Sevilla imitaron pronto la nueva moda de llevar el chal y asiacute nacioacute la laquotapadaraquo hispana Desde Sevilla la nueva moda

150 JUAN FRANCISCO MAURA

fue a las colonias de ultramar y tomoacute raices especialmente en el Peruacute (Martiacuten 317-18)

En un reciente estudio sobre la educacioacuten de la mujer en la Ameacuterica virreinal apare-cen algunos ejemplos significativos de mujeres espantildeolas que consagraron gran parte de sus vidas a la tarea docente Dentro del proceso educativo de las espantildeolas que fueron a las Indias destaca el papel de dontildea Catalina de Bustamante Joseacute de Jesuacutes Vega y Ma-riacutea Luisa Caacuterdenas de Vega dicen en su obra Ameacuterica Virreinal La Educacioacuten de la mujer que esta mujer pocos antildeos despueacutes del descubrimiento del Nuevo Mundo se dedicoacute a trabajar en favor de los indios aunque por desgracia su nombre y sus hechos en la labor docente hayan sido ignorados por los historiadores modernos (Vega 12-13)

Son varias las veces que se nombra a Catalina de Bustamante en el citado estudio y varias las fuentes antiguas en que se recoge la presencia de tan distinguida laquomatrona muy honrada y de buen ejemploraquo de la que ya hablaba Zumaacuterraga y sobre la que se hizo un informe enviado a Carlos V describiendo sus actividades en la Nueva Espantildea firmado por cuatro de los misioneros maacutes conocidos de Meacutexico

El informe dice que los franciscanos de Texcoco acababan de cons-truir un nuevo monasterio y cedido el antiguo A una honrada y honesta y muy virtuosa matrona que se dice Catalina de Bustamante para que ende instruyese a las hijas de los sentildeores de la comarcala cual con el favor de Dios y limosnas que don Hernando [Corteacutes] les haciacutea para su sustentacioacuten [teniacutea en esa casa-hogar] hasta trescientas mujeres antes maacutes que menos (Vega 14)

Estas laquocasas-hogarraquo no estaban regentadas necesariamente por monjas sino por lo que llamaban laquobeatasraquo mujeres que sin estar estar sujetas a la autoridad eclesiaacutestica se dedicaban a un laquolucro honestoraquo Llamadas tambieacuten laquobeateriosraquo eran diferentes a los conventos de monjas y constituiacutean las primeras escuelas de la mujer en la Nueva Espa-ntildea (Vega 20-21) Fue gracias al ejemplo de mujeres como Catalina de Bustamante que dedicaron sus vidas a la educacioacuten de los indiacutegenas que existiesen otras continuando su ejemplo Motoliniacutea dice claramente que laquode ese primer encerramiento (el de Texcoco regentado por Catalina) salieron otras honestas y muy virtuosas duentildeas que ensentildeaban a las maacutes menudasraquo (Vega 23)

Pero dontildea Catalina de Bustamante pese a ser una singular mujer y la iniciadora de la educacioacuten de la mujer en Meacutexico no fue un caso aislado corresponde maacutes bien a un patroacuten al que se ajustaron muchas de las pioneras de la Nueva Espantildea que sembraron instituciones de educacioacuten de la mujer En 1530 unos antildeos maacutes tarde aparecioacute una de las grandes protectoras de la instruccioacuten femenina en Ameacuterica La emperatriz Isabel de Portugal (Vega 24)

Desde comienzos de la conquista fueron varios los centros docentes regentados por mujeres en los que la ensentildeanza no estaba impartida por monjas Una de las institucio-nes maacutes sobresalientes del sistema educativo fue el Colegio de Nintildeas que se establecioacute en la ciudad de Meacutexico a principios del siglo XVI con maestras que no eran monjas Estas seglares conocidas comunmente como laquomigasraquo eran las descendientes de las antiguas beatas Su ubicacioacuten permanente fue determinada en 1548 lugar que serviriacutea de escue-la ininterrumpidamente hasta 1862 cuando el edificio fue convertido en bodega (Vega 60) No se debe perder de vista que no soacutelo por el hecho de llevar una vida secular se

151ESPANtildeOLAS DE ULTRAMAR EN LA HISTORIA Y EN LA LITERATURA

gozaba de maacutes privilegios Era maacutes bien al contrario En las carreteras las mujeres segla-res no inspiraban el mismo respeto que las monjas que ademaacutes teniacutean contacto cons-tante con personas de los dos sexos no pertenecientes a la Iglesia (Arenal 297) Ademaacutes dentro de las murallas del convento desapareciacutean muchas de las barreras sociales que limitaban a la mujer de esta eacutepoca

La presencia femenina y la monarquiacutea

Pues iquestcoacutemo sabes tuacute preguntoacute don Quijote que los grandes llevan detraacutes de siacute a sus caballerizos Yo seacute lo direacute respondioacute Sancho Los antildeos pasados es-tuve un mes en la corte y alliacute vi que paseaacutendose un se-ntildeor muy pequentildeo que deciacutean que era muy grande un hombre le seguiacutea a caballo a todas las vueltas que daba que no pareciacutea que era su rabo Pregunteacute que coacutemo aquel hombre no se juntaba con el otro sino que siempre anda-ba tras deacutel Respondieacuterome que era su caballerizo y que era uso de grandes llevar tras siacute a los tales Desde enton-ces lo seacute tan bien que nunca se me ha olvidado (Cervan-tes Don Quijote)

Los monarcas espantildeoles fueron conscientes de que sin la presencia femenina difiacute-cilmente se podriacutea solidificar una conquista a todos los niveles La mayor parte de los virreyes y altos cargos trajeron a sus mujeres con ellos y en las ciudades principales de Hispano-Ameacuterica como la ciudad de Meacutexico Guatemala Lima o Potosiacute habiacutea mujeres que disfrutaban de una esmerada educacioacuten (gramaacutetica latiacuten poesiacutea historia muacutesica) Esto dariacutea origen a una elegante y hasta cierto punto sofisticada sociedad en la que las mujeres tomaron parte en asuntos maacutes importantes que los que sus homoacutelogas toma-ran en las colonias portuguesas laquoThere were brilliant vice-regal courts at Mexico City and Lima far exceeding anything that could be found in Portuguese or English America during the seventeenth centuryraquo (Boxer 39) Las estadiacutesticas con las que contamos hoy no soacutelo demuestran que las mujeres llegaron al Nuevo Mundo en respetables porcen-tajes sino que ademaacutes tuvieron una participacioacuten activa llegando a intervenir en algu-nos casos en las liacuteneas de vanguardia Resulta difiacutecil aproximarse al estado de aacutenimo de aquellas mujeres que vivieron en eacutepocas tan lejanas Para ello es necesario indagar en los documentos de la eacutepoca para lograr rescatar del pasado todos esos tesoros de la historia muchas veces tergiversados y manipulados con el fin de que sirvan a propoacutesi-tos actuales Es en los viejos manuscritos donde queda testimoniada su presencia tan rica en dolores tragedias y por queacute no en amores Fue la llegada de estas mujeres una brisa de esperanza y de ilusioacuten para aquellos que ya estaban en las tierras de ultramar y

152 JUAN FRANCISCO MAURA

veiacutean venir de su propia tierra aquello que maacutes antildeoraban amantes madres hermanas Un haacutelito de vida y poesiacutea que suavizaba las costumbres de estos rudos y romaacutenticos pioneros laquoporque para ser hombres de tales empresas algo de romaacutentico debioacute de existir en ellos y que es tan propio del espantildeol y abandonariacutean en brazos tan gentiles sus bruscos modales que habiacutean adquirido en aacutespero contacto en selvas y montantildeasraquo (Villafantildee 125)

Hoy sabemos que en la normativa oficial de la Espantildea del siglo XVI y XVII se favoreciacutea el paso de mujeres al Nuevo Mundo Afirmar lo contrario no solamente es falso sino que implica un desconocimiento total de los primeros dos siglos de la colonizacioacuten espantildeola La presencia de estas mujeres espantildeolas fue efectiva laquolas disposiciones al respecto demuestran claramente que se teniacutea especial intereacutes en su arraigo y que se tra-taba de defender su posicioacuten de mujeres casadas con conquistadores y colonizadoresraquo (Villafantildee 126) Los monarcas comprendiacutean que era praacutecticamente imposible que los hombres viviesen sin mujeres y que de ser asiacute era de esperar que se cometiesen abusos con las indias lo que incidiriacutea en la moral social y en el buen gobierno de la colonia Ademaacutes sin un asentamiento definitivo con hogares y familias difiacutecilmente se podriacutea llevar a cabo una presencia permanente en las nuevas colonias (Orsquo Sullivan-Beare 45)

Empezando por los Reyes Catoacutelicos la preocupacioacuten de que en las colonias se esta-bleciesen nuacutecleos que tuviesen como base la familia cristiana fue clara Las capitulacio-nes que a este efecto se hicieron entre los conquistadores y la Corona fueron nume-rosas La efectuada entre Rodrigo de Baacutestidas y Carlos V puede ser un buen ejemplo Fechada en Valladolid el 6 de noviembre de 1524 muestra el propoacutesito de Baacutestidas de establecer una colonia permanente en la desembocadura del riacuteo Magdalena en el terri-torio que hoy vendriacutea a corresponder a Colombia El documento firmado por el Empe-rador comienza asiacute

El Rey Por cuanto por parte de vos Rodrigo de Baacutestidas vecino de la ciudad de Santo Domingo de la Isla Espantildeola Me fueacute fecha relacioacuten que por servicio de la Catholica Reyna Mi Sentildeora e Nuestro os ofre-ceacuteis de poblar e poblariades la provincia e puerto de Santa Marta que en Castilla de Oro llamada la Tierra Firme e que la poblariades dentro de dos antildeos siguientes haciendo en ella un pueblo en que no menos haya en eacutel al presente cincuenta vezinos que los quince de ellos sean casados y tengan consigo a sus mujeres y que lo teniades fecho dentro de dos antildeos y de hoy en adelante lo maacutes que fuese posible asiacute de cris-tianos espantildeoles como de indios (Restrepo 1 30)

De igual manera el priacutencipe Felipe (futuro Felipe II) en las capitulaciones establecidas en 1547 con Juan de Sanabria para que eacuteste fuese como gobernador y capitaacuten general de la dicha provincia escribe lo siguiente laquoPrimeramente que seais obligado e os obligeis a llevar destos Reynos de Castilla a la dicha provincia del Rio de la Plata cien casados con sus mujeres e hijos para poblar la dicha provincia y con ellos llevareis a vuestra muger e hijos (CDI de Ameacuterica y Oceaniacutea 23 119)

En numerosas ocasiones se pone de manifiesto el apoyo de la monarquiacutea a la emigra-cioacuten femenina tantas que difiacutecilmente se podriacutean enumerar todos los casos Lo cierto es que la legislatura vigente favoreciacutea la emigracioacuten y traslado de mujeres con toda una se-

153ESPANtildeOLAS DE ULTRAMAR EN LA HISTORIA Y EN LA LITERATURA

rie de alicientes137 sobre todo si eacutestas estaban casadas pasaje para llevar a las familias franquicia de derecho para los artiacuteculos que portasen consigo favoritismo en cargos destinos y contrataciones a aquellos que pasasen con sus mujeres incluyendo ademaacutes de los castellanos y leoneses a suacutebditos de otras partes de la corona incluso genoveses y portugueses si estos veniacutean acompantildeados de sus consortes (Fernaacutendez Duro 15-16)

Incluso se llegoacute a imponer penas a aquellos hombres casados que no llevasen a sus mujeres con ellos a Indias en el teacutermino de un antildeo El mismo emperador en una ceacutedula otorgada al virrey de la Nueva Espantildea le recomendaba que laquoprocurase persuadir a ca-sarse a los solteros que estuviesen en edad y situacioacuten de hacerloraquo prometieacutendoles que al efectuar el matrimonio seriacutean preferidos en el reparto de indios En la isla de San Juan de Puerto Rico los cargos oficiales y oficios puacuteblicos debiacutean de ser desempentildeados por los casados en primer lugar En Meacutexico ocurrioacute lo mismo con los cargos de corregido-res (Konetzke laquoemigracioacutenraquo 140-41) Felipe II al igual que sus antecesores y sucesores reiteraraacute y justificaraacute los beneficios de los que seraacuten acreedores aquellos que tengan allaacute a sus mujeres laquoque los que han servido en los descubrimientos de las dichas Indias y tambieacuten los que ayudan a la poblacioacuten dellas que tienen allaacute sus mugeres sean preferi-dos en los aprouechamientos qualesquierraquo mandando que despueacutes de los conquistado-res se tuviera en cuenta para la laquoprovisioacuten de los corregimientosraquo a los colonos casados siempre que estuvieran capacitados para dichos cargos (Konetzke laquoemigracioacutenraquo 141)

Las disposiciones en favor del matrimonio son claras ya sea por medio de un favo-ritismo manifiesto como en los casos antes citados o mediante medidas de cohercioacuten para que esta poliacutetica se llevase a cabo Don Sebastiaacuten Ramiacuterez de Fuenleal obispo de Santo Domingo y presidente de la Audiencia de Meacutexico propuso que a aquellos enco-menderos que no estuviesen casados y que no hubiesen tomado parte en la conquista se les quitase los indios concedidos con la obligacioacuten de devolveacuterselos si en el plazo de un antildeo habiacutean contraiacutedo matrimonio (Konetzke laquoemigracioacutenraquo 142-43) Por supuesto hubo excepciones a estas reglas En algunos casos ni la mujer teniacutea especial intereacutes en vivir junto con su marido en las Ameacutericas ni el marido queriacutea ir a buscar a su mujer pasado el plazo de un antildeo En el presente documento y de forma excepcional las auto-ridades reales protegen a los conyuges para que puedan seguir viviendo separados en continentes diferentes

Nuestras justicias de la ysla de Cubagua e otras qualesquier de las nuestras Yndias yslas e tierra firme del mar oceacuteano e a cada uno e qualquier de vos a quieacuten esta mi ceacutedula fuese mostrada por parte de Alonso de Tapia nuestro veedor de la provincia de Paria me ha sido hecha relacioacuten que ha mucho tiempo que reside en esas partes donde nos ha servido en lo que se ha ofrecido e que agora vos otros le apre-miaacuteis a que venga o embiacutee a estos Reinos por su muger lo cual no puede al presente hazer a causa de no ter posibilidad para ello a mi me ha suplicado vos mandase que no le compeliacuteesedes ny apremiaacutesedes a que viniese o enviase por la dicha su muger y dieacutesedes por libres los fiadores que tenyades para que dentro de un antildeo embiariacutea o verniacutea por

137 Reales Ceacutedulas de los antildeos 1502 y 1503 Academia de la Historia Coleccioacuten Muntildeoz tomo 75 fols 209 y 220 citado por Fernaacutendez Duro 15

154 JUAN FRANCISCO MAURA

ella o como la mi merced fuese lo cual visto por los de nuestro consejo juntamente con una peticioacuten presentada por dontildea Mariacutea Gudiel muger del dicho Alonso de Tapia por la cual nos suplica lo mismo que acor-dado que debiacutea mandar esta mi ceacutedula para vos por la qual vos mando que no compelaacuteis ni apremieacuteis al dicho Alonso de Tapia a que venga ni enviacutee a estos reinos por la dicha su muger si no fuere a que la pro-vea de lo que fuere necesario para su mantenimiento y deys por libres quales quier fianzas que sobre ello haya dado e no fagades ende al por alguna manera Firmado en la villa de Valladolid a VII diacuteas del mes de febrero de mil e quinientos e treinta y siete antildeos yo el licenciado Con-de de Samano y sentildealada del cardenal Beltraacuten y Carbajal [Aparte en letra pequentildea] Este diacutea se despachoacute una provisioacuten por la cuaacutel su Mag hizo merced a Alonso de Tapia de la veedoriacutea de la provincia de Paria por muerte de Garciacutea de Aguilar con las clausulas ordinarias y con el mismo salario que teniacutea Aguilar Firmado del emperador y de Beltraacuten y Bernal y Velaacutezquez El Rey (Registro de disposiciones Riacuteo Marantildeoacuten AGI Indiferente General Legajo 416 libro 2 Fols 94v y 95r)

El punto maacutes interesante a destacar de todas estas disposiciones oficiales en cuanto a la emigracioacuten femenina al Nuevo Mundo no es otro que la libertad que se da a la mujer de decidir si quiere o no casada o sin casar trasladarse al nuevo continente no como una imposicioacuten sino como un precepto laquoel espiacuteritu de las disposiciones en el sentido de asegurar la vida marital de los casados significa que la mujer que su marido invita a pa-sar a las Indias puede negarseraquo (Villafantildee 127) Habriacutea que ver las opciones laquorealesraquo ade-maacutes de las legales y econoacutemicas que le quedaban a la mujer si tomaba esta decisioacuten

El saber la libertad de eleccioacuten que estas mujeres teniacutean de antemano antes de aden-trarse en las interminables penalidades y aventuras que los viajes de la navegacioacuten tran-soceaacutenica suponiacutean hace que sus hechos y esfuerzos cobren auacuten maacutes relieve En nume-rosas ocasiones estas mujeres cruzaron el oceacuteano una y maacutes veces sin otro motivo que el de defender los derechos e intereses de los suyos Lo que resulta maacutes valioso de todo esto es que lo hicieran por propia iniciativa arriesgando sus vidas para que se hiciese justicia y para que no les faltase lo necesario a aquellos que estaban en la otra orilla Las autoridades vigentes conocedoras de los vaciacuteos legales existentes en las nuevas colo-nias se apresuraron a poner en vigor aquellas normas que redundaran en el beneficio de los menos favorecidos por las circunstancias La institucioacuten del matrimonio cuya trans-cendencia es fundamental en la vida juriacutedica y social de la mujer tuvo que ser legislada en Ameacuterica con una serie de nuevas disposiciones agregados modificaciones y aclara-ciones Asiacute pues la legislacioacuten de base espantildeola tuvo que sufrir en tierras americanas esta serie de cambios por motivos poliacuteticos y sociales (Villafantildee 126)

Para hacer un sumario de lo dispuesto hasta el siglo XVI en cuanto a la legislacioacuten de las mujeres que teniacutean familia o intereses en Indias merece la pena mencionar que existieron una serie de disposiciones que protegiacutean a las mujeres para que eacutestas no se viesen abandonadas por sus maridos En un epiacutegrafe de la Recopilacioacuten de 1680 (libro VII tiacutetulo 3) se deja ver claramente la preocupacioacuten de las autoridades en este asunto laquoDe los casados en Espantildea e Indias que estaacuten ausentes de sus mujeres y esposasraquo (Vi-llafantildee 126-27)

155ESPANtildeOLAS DE ULTRAMAR EN LA HISTORIA Y EN LA LITERATURA

La lista de disposiciones se hace interminable En los reinados de Fernando el Catoacute-lico Carlos V Felipe II Felipe III o incluso Carlos II la insistencia es constante La ra-zoacuten de esta insistencia seriacutea bastante obvia dado que con un oceacuteano por medio seriacutean muchos los que se aprovechasen de llevar una doble vida marital sin el estricto control y vigilancia de sus mujeres que se encontraban en la peniacutensula La ley XXVII libro IX tiacutetulo XXVI determina laquoDeclaramos por personas prohibidas para embarcarse y pasar a las Indias todos los casados y desposados en estos reinos lsquosino llevaren con ellos sus mujeresrsquo aunque sean virreyes oidores gobernadores o nos fuesen a servir en cual-quier cargo y oficios de Guerra Justicia y Hacienda porque es nuestra voluntad que todos los susodichos lleven a sus mujeresraquo (Villafantildee 127) laquoLos eclesiaacutesticos eran los en-cargados de dar cuenta a los tribunales competentes de aquellos que estando casados permaneciacutean en Indias sin sus mujeres Son reiteradas las disposiciones de Fernando el Catoacutelico en este sentidoraquo138 En 1514 el rey don Fernando ordena en una provisioacuten para la isla Espantildeola laquodoy licencia eacute facultad aacute cualquier persona naturales de estos Reynos para libremente se puedan casar con mujeres naturales de esa dicha ysla sin tener que incurrir por ello en pena algunaraquo (Villafantildee 129)

No se debe olvidar tampoco a aquellas mujeres que decidieron pasar a las laquonuevas tierrasraquo solteras Estas mujeres tambieacuten tuvieron un papel importante en el desarrollo de las nuevas colonias Los organismos espantildeoles del momento como los mandatarios indianos y todos los cronistas no dejaron pasar desapercibida la importancia social de estas mujeres en la poliacutetica de poblamiento laquo[E]s cierto que los pueblos de Indias nuevamente poblados no se tienen por fijos o estables ni permanentes hasta tanto que mujeres espantildeolas entren en ellos y los encomenderos y conquistadores se casen por muchas causas y respetos buenos y saludables que para ello hayraquo (Villafantildee 126-27)

Si la intencioacuten era la de una presencia permanente en las tierras americanas la mujer soltera que pasase a ellas siempre seriacutea un motivo maacutes para el colono o conquistador de continuar en el mismo suelo Se podriacutea empezar una familia si asiacute se quisiese sin tener que pensar en volver a la metroacutepoli ya fuese a disfrutar de los bienes adquiridos o a laquobuscarraquo una esposa El problema aparecioacute cuando se produjo un exceso de mujeres solteras lo que de alguna manera alteroacute la estructura social existente ya que no habiacutea muchas opciones para ellas aparte del matrimonio o el convento

En consideracioacuten a que la experiencia habiacutea demostrado que un exce-sivo nuacutemero de mujeres ejerciacutea perniciosa influencia sobre la moral y las costumbres se suplicaba al rey no otorgase a aquellas tantas auto-rizaciones para emigrar al Peruacute La ciudad de la Plata fundada en 1538 emite en 1577 un informe en el que se expone la urgente necesidad de que se funde un convento de monjas pues en el territorio de las Au-diencias de Los Charcas existiacutea un gran nuacutemero de muchachas que no pudieacutendose casar se hallaban en gran peligro de perderse (Konetzke laquoemigracioacutenraquo 149)

138 Solorzano Pereira Juan de Libro Primero de la Recopilacioacuten de las Ceacutedulas Reales Cartas y Provisiones y Or-denanzas Reales Noticia preliminar de Ricardo Levenne Universidad de Buenos Aires Facultad de Derecho Y Ciencias Sociales Pub del Instituto de Historia del Derecho Argentino Coleccioacuten de Textos y Documentos para la Historia del Derecho Argentino t V Buenos Aires Imp de la Universidad de Buenos Aires 1945 (Li-bro I Ley 10 laquoQue los Espantildeoles puedan casar con Indias y al contrario a su voluntadraquo t2 p 138 citado en Villafantildee 129

156 JUAN FRANCISCO MAURA

Entristece ver coacutemo se manejan las cifras de estas mujeres como si de ganado o de bienes suntuarios se tratase Por otra parte existieron irregularidades como la de pobla-doras espantildeolas que vivieron amancebadas con hombres que ya estaban casados en la peniacutensula Normalmente esto ocurriacutea cuando la estancia del conquistador se prolonga-ba maacutes de lo debido en lugares donde habiacutea pocas espantildeolas Muchas veces nacieron hijos de estas uniones que hicieron auacuten maacutes difiacutecil la situacioacuten para las mujeres que esperaban en Espantildea a un marido que ya no teniacutea ningunas intenciones de volver En los juicios de residencia los documentos acostumbran a citar estos casos ya que era parte de su obligacioacuten castigar las irregularidades extramatrimoniales y salvaguardar las buenas costumbres familiares que con tanto intereacutes se deseaba mantener laquoUn ejemplo nos lo da la isla de Cuba donde en 1532 viven con hombres casados Olalla Hernaacuten-dez Santillana Aranda lsquola Cordobesarsquo Catalina de Leoacuten Catalina Saacutenchez Francisca Hernaacutendez Mayor de Azebedo Juana de Valeros y lsquouna mujer que estaba en casa de Ayalarsquoraquo (Borges 416)

Estos casos no fueron aislados y mucho menos en Cuba centro neuraacutelgico de todo el movimiento de ida y vuelta entre la metroacutepoli y el Nuevo Mundo Estas ocho acusa-ciones por lo tanto no tienen porqueacute considerarse extraordinarias y menos en el lugar maacutes cosmopolita de las Indias en esos momentos al que llegaban flotas a cada momen-to Al parecer existieron casos parecidos en el Riacuteo de la Plata Peruacute y Nueva Espantildea (Ratcliffe 347) El margen legal para que estas mujeres viviesen como quisiesen estuvo limitado por una moral que veiacutea uacutenicamente en el matrimonio o el convento una salida laquovaacutelidaraquo para que fueran aceptadas socialmente Los hombres en iguales circunstan-cias fueron juzgados por una laquomoralraquo mucho maacutes permisiva

La mujer y el cuerpo eclesiaacutestico

Pues iquestquieacuten diablos os traiacutedo aquiacute dijo don Quijote siendo hombre de la iglesia iquestQuieacuten sentildeor replicoacute el caiacutedo laquomi desventuraraquo Pues otra mayor os amenaza dijo don Quijote sino me satisfaceacuteis a todo cuanto primero os pregunteacute (Cervantes Don Quijote )

Otro factor a tener en cuenta en un anaacutelisis sobre la presencia de la mujer en el Nuevo Mundo es el que tiene que ver con la institucioacuten maacutes importante de las que llegaron desde Europa la iglesia catoacutelica Sin aacutenimo de criticar a tan compleja institucioacuten res-ponsable de gran parte de los aconteceres en el Nuevo Mundo vale la pena analizar algunas singularidades Muchos de sus miembros fueron grandes ejemplos de valor e inteligencia a la hora de tratar los maacutes variados y escabrosos asuntos con los que se encontraron los cristianos en la otra orilla durante este periacuteodo Se debe resaltar tam-

157ESPANtildeOLAS DE ULTRAMAR EN LA HISTORIA Y EN LA LITERATURA

bieacuten su caraacutecter medieval en la manera de hacer apostolado y de entender y tratar a los potenciales cristianos Si se tienen en cuenta los privilegios y prerrogativas que algunas de las altas jerarquiacuteas eclesiaacutesticas tuvieron no seriacutea superfluo estimar que un respeta-ble porcentaje de la poblacioacuten de origen laquodudosoraquo muy bien podiacutea venir de la misma iglesia Fueron muchas las viacutectimas y muchas las familias divididas por un padre laquoinvi-sibleraquo Gran parte de los hijos o laquosobrinosraquo de estos sacerdotes pasaron a ocupar cargos similares incluyendo los privilegios que estos cargos llevaban consigo como si se trata-se de cualquier otro oficio gremial transmitido generacionalmente regla tan comuacuten en la Europa medieval Todaviacutea a finales del siglo XIII en Espantildea los derechos de los hijos y nietos de los sacerdotes estaban protegidos por la ley sin que hubiesen podido ser erradicados por las reformas gregorianas (Ratcliffe 347)139

Las letras espantildeolas ya se haciacutean eco de estos lances amorosos entre representantes de la Iglesia y ciertas damas del lugar desde los tiempos del poeta riojano Gonzalo de Berceo En su obra maacutes conocida Los milagros de Nuestra Sentildeora Berceo describe con un realismo ingenuo y sencillo relatos de humor y de humanismo sobre aquellos hombres de carne y hueso que eran perdonados por la intercesioacuten de la Virgen Mariacutea Juan Ruiz por su lado haraacute de su Libro de buen amor la obra maacutes representativa en este sentido Seriacutea prolijo recordar la actuacioacuten de la Iglesia durante diversos periacuteodos de la Edad Media no soacutelo en Espantildea sino en toda Europa En la Espantildea musulmana del siglo XII concretamente en Sevilla el comportamiento de los representantes de la iglesia cristia-na (mozaacuterabe) en territorio islaacutemico es duramente criticado por el sevillano Ibn Abdun Este precioso documento muestra el estricto control y falta de confianza que existiacutea sobre la mujer prohibieacutendolas que entrasen en las laquoabominablesraquo iglesias cristianas

porque los cleacuterigos [cristianos] son libertinos fornicadores y sodomi-tas Asimismo debe prohibirse a las mujeres francas que entren en la iglesia maacutes que en diacuteas de funcioacuten o fiesta porque alliacute comen beben y fornican con los cleacuterigos y no hay uno de ellos que no tenga dos o maacutes de estas mujeres con que acostarse Han tomado esta costumbre por haber declarado iliacutecito lo liacutecito y viceversa Convendriacutea pues mandar a los cleacuterigos que se casasen como ocurre en Oriente y que si quie-ren lo hagan (Leacutevi-Provenccedilal 150)

Pese a existir una convivencia paciacutefica durante gran parte de la Edad Media entre los tres credos monoteiacutestas de Espantildea (cristianos musulmanes y judiacuteos) esto no suponiacutea que no existiese desprecio y desconfianza entre estos grupos religiosos Dice Abdun resaltando el peligro que suponiacutea que una mujer entrase en casa de un cleacuterigo cristiano de vida ceacutelibe

No debe tolerarse que haya mujer sea vieja o no en casa de un cleacuterigo mientras eacuteste rehuacutese casarse Obliacutegueseles ademaacutes a circuncidarse co-mo les obligoacute al-Mutadid pues si a lo que dicen siguen el ejemplo de Jesuacutes (iexclDios les bendiga y salve) Jesuacutes se circuncidoacute y precisamente ellos que han abandonado esta praacutectica tienen una fiesta que celebran solemnemente el diacutea de su circuncisioacuten (Leacutevi-Provenccedilal 150-151)

139 Valdriacutea la pena ver si han cambiado mucho las cosas desde hace quinientos antildeos a esta parte o si in-cluso la iglesia moderna ha retrocedido en tolerancia en cuanto a las relaciones sexuales de los representantes de la Iglesia

158 JUAN FRANCISCO MAURA

El historiador argentino Germaacuten Arciniegas recoge un pasaje ilustrativo de lo men-cionado anteriormente pero trasladado al ambiente de la colonia diciendo que incluso en poblaciones pequentildeas como Santa Fe con poco maacutes de un convento y una ermita la fragilidad de la carne enredaba a frailes soldados y virreyes por igual laquoEl buen So-liacutes que murioacute en olor de santidad con la cabeza reclinada sobre un par de ladrillos y en saya de franciscano cruzaba en las noches el solar de su palacio para ir a besar a la Marichuelaraquo (118-19)

Arciniegas recoge tambieacuten un suceso aparecido en el diario de Lima en 1667 que no tuvo que ser extraordinario durante los primeros antildeos de la colonia laquoEl fraile carmelita mdashGrande hereje y siendo sacerdote deciacutea misa gran perro lujurioso deshonesto que relatando sus maldades dijo que en cierta ciudad habiacutea conocido carnalmente a maacutes de trescientas y sesenta mujeres y en un convento de monjas habiacutea cometido muchos sacrilegios Este lo trujeron preso de Buenos Aires por Chileraquo (119)

Las controversias de la iglesia moderna sobre las relaciones que los eclesiaacutesticos de-ben tener con el sexo femenino parece que no han encontrado todaviacutea respuesta Sigue existiendo miedo y recelo a que la mujer comparta no soacutelo poder en la jerarquiacutea de la iglesiacutea sino en la vida privada de los miembros de la institucioacuten En la Nueva Espantildea el primer obispo de Meacutexico Juan de Zumaacuterraga viendo en la mujer un ser de tentacioacuten irresistible prohibioacute terminantemente la presencia de eacutestas en su casa Ni siquiera para su limpieza y aseo El franciscano Juan de Torquemada se refiere a este comportamien-to como una de las virtudes del popular obispo

Fue este benditiacutesimo prelado muy amigo de la virtud y de virtuosos y aceacuterrimo reprehendedor de vicios y viciosos y tan enemigo de la ociosidad que no permitiriacutea que alguno de su casa estuviese ocioso fue amiciacutesimo de la limpieza por lo cual jamaacutes consintioacute que mujer alguna entrase en su casa aunque fuese necesaria al servicio de ella ni nunca consintioacute que por alguna ocasioacuten subiese mujer a lo alto y aposentos de ella antes lo teniacutea todo cerrado como un monasterio porque sabiacutea (como quien tambieacuten sabiacutea) que la ocasioacuten suele derribar los maacutes fuertes y robustos corazones (450 lib 20 cap 31)

No fueron uacutenicamente miembros de la iglesia catoacutelica los que valoraron la lucha con-tra la tentacioacuten siguiendo al pie de la letra el crudeliacutesimo refraacuten laquoentre santa y santo pared de cal y cantoraquo Se tienen algunas noticias de la vida social de los primeros tiem-pos de la colonia En estos documentos se puede observar coacutemo no distaban mucho las oacuterdenes que se dictaban en la metroacutepoli y las que se llevaban a cabo en la Nueva Espantildea La vida social tanto de damas como de algunos miembros de la iglesia de las colonias era maacutes laquorelajadaraquo de lo que las normas permitiacutean Gracias a la informacioacuten ofrecida por Manuel Romero de Terreros disponemos de los nombres de las primeras virreinas

Las esposas de los primeros cinco Virreyes Don Antonio de Mendoza Don Luis de Velasco Don Gastoacuten de Peralta Don Martiacuten Enriacutequez de Almanza y Don Lorenzo Suaacuterez de Mendoza Conde de la Coruntildea fueron respectivamente Dontildea Caterina de Vargas Dontildea Ana de Cas-tilla y Mendoza hija de Don Diego de Castilla Sentildeor de Gor y Caba-

159ESPANtildeOLAS DE ULTRAMAR EN LA HISTORIA Y EN LA LITERATURA

llerizo de Carlos V Dontildea Leonor de Vieo Dontildea Mariacutea Manrique hija del Marqueacutes de Aguilar y Dontildea Catalina de la Cerda hija del segundo Duque de Medinaceli (Romero 2)

Existen noticias concretas de la seacuteptima virreina de la Nueva Espantildea (1586) dontildea Blanca de Velasco marquesa de Villamanrique En ellas destaca lo anteriormente men-cionado sobre la falta de tolerancia existente en aquellos tiempos difiacutecilmente com-prensible si no fuera por fragmentos esporaacutedicos conservados sobre la vida colonial en la Nueva Espantildea En la siguiente Relacioacuten hecha por autores anoacutenimos sobre la visita que hizo Fray Alonso Ponce Comisario General de la Orden Seraacutefica a las provincias de la Nueva Espantildea se mencionan las eneacutergicas medidas que con los miembros de su orden en su opinioacuten de moral laquomuy relajadaraquo tomoacute este religioso Tambieacuten aparecen mencionadas sus relaciones con la Virreina

Captoacutese ademaacutes la enemistad del gobernante y de la Virreina Dontildea Blanca de Velasco hija del cuarto Conde de Nieva sentildeora seguacuten pare-ce de conducta ligera y caraacutecter maacutes que dominante laquoPor este mismo tiempo (septiembre de 1586) fueron el Virey y la Vireyna a holgarse y recrearse en la cibdad de Xochimilco Posoacute con toda su casa dentro de nuestro convento en un dormitorio deacutel y detuacutevose alliacute siete u ocho diacuteas en que los indios les hicieron grandes fiestas aunque les costaron caras porque en una dellas murieron dos o tres dellos con un tiro que se disparoacute y reventoacute y al principal indio de aquella cibdad hirieron muy malraquo (Romero 3-4)

A pesar del riacutegido control eclesiaacutestico y civil que habiacutea en la Nueva Espantildea existieron tambieacuten pareacutentesis en los que incluso miembros de la iglesia y mujeres mdashhumanos al fin y al cabomdash pudieron disfrutar de algunos momentos de regocijo y alegriacutea Con-tinuando con la cita anterior el mismo autor se queja del laquoexcesoraquo de libertad en los frailes que se suponiacutea que teniacutean que profesar una extremada pobreza y no digamos castidad En primer lugar se describen pormenorizadamente la abundancia en el tipo y cantidad de comida de toda clase dulces y vino que se consumieron con largueza y generosidad durante aquellas fiestas Pero lo que maacutes indigna al autor (o autores) fue que llegasen a entrar mujeres en el convento

y aunque todo esto es malo delante de Dios y delante de los hom-bres lo que maacutes mal parecioacute y de que todo el mundo tuvo que mur-murar fueacute la demasiada libertad rotura y disolucioacuten que hubo en en-trar y estar muy de propoacutesito mujeres no soacutelo la Vireyna y las suyas sino otras muchas dentro del dicho convento y andar por las celdas como si fuese cosa profana y como si no hubiera breve apostoacutelico que soacute graves penas y censuras prohibe estas entradas y como si a los frai-les no los comprendiera el dicho breve por admitirlas y no estuviera asiacute declarado y mandado por nuestros estatutos generales de Toledo (Romero 4-5)

La preocupacioacuten por las laquotentaciones de la carneraquo fuera del matrimonio siempre es-tuvo en la mente de los religiosos espantildeoles asiacute como de otras nacionalidades y reli-

160 JUAN FRANCISCO MAURA

giones que intentaban vanamente erradicar algo tan intriacutenseco al ser humano como a cualquier otra especie animal Esta preocupacioacuten se acentuoacute mucho maacutes en el Nuevo Mundo donde muchas sociedades tribales no veiacutean a la mujer como parte integrante de su propiedad privada La razoacuten es obviamente socioloacutegica y ha existido desde el principio de los tiempos en las civilizaciones maacutes primitivas laquoNo desearaacutes a la mujer del proacutejimoraquo El quebrantar este precepto equivaldriacutea a desestabilizar desde su base a la sociedad judeo-cristiana fundamentada en la familia Las penas aplicadas en estas transgresiones seraacuten lo suficientemente severas como para marginar socialmente mdashen el mejor de los casosmdash a aquellos que las pongan en praacutectica Siendo la mujer la encar-gada por la naturaleza de trasmitir la descendencia de la especie su libertad sexual se veraacute limitada por el peligro de quedar embarazada cada vez que ignore tal elemental precepto140

Primeras escritoras del Nuevo Mundo

Contra cuerdos y contra locos estaacute obligado cualquier caballero andante a volver por la honra de las mujeres cualesquiera que sean Cuanto maacutes por las reinas de tan alta guisa y pro como fue la reina Madaacutesima a quien yo tengo particular aficioacuten por sus buenas partes porque fuera de haber sido fermosa ademaacutes fue muy prudente y muy sufrida en sus calamidades que las tuvo muchas (Cervantes Don Quijote)

Fueron varias las escritoras que durante los siglos XVI y XVII tuvieron una relacioacuten di-recta o indirecta con el Nuevo Mundo Muchas de ellas eligieron la vida monaacutestica mdashen algunos casos como refugio huyendo de sus maridosmdash uacutenica salida en una estructura social en donde no eran muchas las opciones especialmente en una eacutepoca donde el fac-tor religioso pesaba casi tanto como el econoacutemico pero sobre todo para dedicarse a una vida espiritual difiacutecilmente alcanzable en otras circunstancias Mariloacute Vigil apunta que las monjas que lo eran por su propia voluntad ademaacutes de tener inquietudes religiosas tambieacuten las teniacutean intelectuales como es el caso de la escritora miacutestica espantildeola Santa Teresa de Jesuacutes (1515-1582) que ademaacutes de tener una de las vidas maacutes interesantes que se conozcan supo sacar tiempo para escribir las maacutes bellas manifestaciones de la poesiacutea liacuterica y sobre todo de la prosa castellana (Vigil 237-38) Cada una de estas mujeres de-dicadas a la vida literaria y espiritual de su tiempo se merece muchiacutesimo maacutes espacio del que se les pueda ofrecer en estas pocas liacuteneas No obstante con estas pasajeras men-

140 Aunque afortunadamente las cosas han cambiado para la mujer no se debe dejar de mencionar la can-tidad de abusos sexuales de la que es viacutectima en la sociedad moderna

161ESPANtildeOLAS DE ULTRAMAR EN LA HISTORIA Y EN LA LITERATURA

ciones se espera al menos incluirlas y poder despertar el suficiente intereacutes para que sus vidas y sus obras no sigan sumergidas en las simas del olvido Para que estas mujeres de la iglesia pudiesen satisfacer su curiosidad cognoscitiva era necesario romper todas aquellas barreras que supusiesen un estorbo o una restriccioacuten a la hora de investigar consultar o hablar con cualquier persona religiosa de cualquier orden o secular ya fue-se obispo o cleacuterigo Las posiciones intelectuales entre las diferentes oacuterdenes religiosas fueron muy dispares como bien es sabido No eran iguales los planteamientos teoloacute-gicos de los dominicos que los de los franciscanos o los de los carmelitas que los de los agustinos o jesuitas Era necesario por lo tanto tener acceso a estas fuentes de informa-cioacuten para poder constrastar las diferencias y hacer valoraciones propias (Vigil 237-38) El escritor espantildeol Caro Baroja destaca el caraacutecter enciclopeacutedico del catolicismo donde se han integrado corrientes y posturas muy dispares que a traveacutes del diaacutelogo daban cierto espacio al creyente con maacutes curiosidad intelectual para que este pudiese compa-rar y valorar las diferentes opciones que se le ofreciacutean (Vigil 237-38)

Varias de estas mujeres intelectuales fueron hijas de conquistadores que aunque na-cidas en suelo americano seguiacutean expresaacutendose en la lengua de sus padres con no me-nos fuerza que sus contemporaacuteneas peninsulares Es cierto que existieron numerosas escritoras en el Nuevo Mundo durante el siglo XVIII algunas dedicadas incluso al estudio de las matemaacuteticas como la mexicana Dontildea Francisca Gonzaga y Castillo Pero para limitar el presente trabajo a los siglos XVI y XVII uacutenicamente se incluiraacuten ejemplos de estos dos siglos

La peruana Josefa de Alarcoacuten publicoacute en 1648 unas liras dedicadas a las Exequias del Priacutencipe Baltasar Carlos

Cifro en capilla breveEl tribunal de la Magestad maacutes graveEn fe de lo que debeA Carlos que en dos mundos no cabe141

El caso de Sor Jeroacutenima de la Asuncioacuten es muy interesante una mujer que tuvo la oportunidad de viajar a Meacutexico y posteriormente a las Filipinas para cumplir con las mi-siones que le habiacutean sido encomendadas por su orden Nacida en Toledo en 1555 en el seno de una noble y acaudalada familia estuvo destinada a recorrer el mundo ofrecien-do sus servicios a todos los necesitados distinguieacutendose por su ardiente caridad laquovien-do que los galeotes eran tratados con dureza excesiva sobre todo cuando los llevaban de un pueblo a otro procuroacute aliviar las penas de aquellos desgraciados y lo consiguioacute en parteraquo (Serrano y Sanz 268 65) Hija del licenciado e ilustre jurista Pedro Garciacutea Yaacute-ntildeez y de dontildea Catalina de la Fuente ingresoacute contra su voluntad en el monasterio de las Clarisas de Santa Isabel de los Reyes (Toledo) el 5 de agosto de 1570 (Trevintildeo 46) hay que decir que eacutesta no seraacute la uacutenica voluntad contra la que tuvo que luchar

Sor Jeroacutenima se embarcoacute para Meacutexico y de alliacute partioacute hacia Manila junto con siete compantildeeras en el famoso laquoGaleoacuten de Manilaraquo que saliacutea anualmente del puerto mexi-cano de Acapulco Su viaje a las Filipinas duroacute un antildeo y tres meses desde su salida de Espantildea tiempo en el que demostroacute un gran valor y determinacioacuten por el soacutelo hecho de

141 Manuel Serrano y Sanz Apuntes para una biblioteca de escritoras espantildeolas desde el antildeo 1401 al 1833 vols 268 269 270 271 Biblioteca de Autores Espantildeoles (Madrid Atlas 1975) 268 19

162 JUAN FRANCISCO MAURA

embarcarse en tan precarias naves Fue la primera misionera de Oceaniacutea muriendo en Manila en 1621 Alliacute fundoacute el monasterio de Santa Clara que perviviriacutea hasta ser bom-bardeado en la Segunda Guerra Mundial (Trevintildeo 47) Escribioacute su Vida donde trata de la fundacioacuten del convento y de todas las tribulaciones mdashllegoacute a ser excomulgadamdash y satisfacciones que una vida dedicada a una causa justa proporciona Tambieacuten escribioacute una obra de caraacutecter filosoacutefico-teoloacutegico titulada Carta de marear en el mar del mundo nombre alegoacuterico que da cuenta de la enorme distancia recorrida a traveacutes del laquomar del espiacuterituraquo por sor Jeroacutenima He aquiacute algunos de sus versos de caraacutecter religioso

Vuestra soy para vos naciacuteiquestQueacute mandaacuteis hacer de miacute Inaccesible grandezaEterna Sabiduriacuteay bondad del alma miacuteaDios un ser poder y Altezamirad la suma pobrezade eacutesta que se ofrece aquiacuteiquestQueacute mandaacuteis hacer de miacute (Serrano y Sanz 268 66)

Ya en Meacutexico tenemos otro ejemplo de una mujer dedicada por completo a Dios y al estudio y composicioacuten de obras de caraacutecter teoloacutegico Dontildea Ana Mariacutea del Costa-do de Cristo nacida en la ciudad de Tlaxcala hacia el antildeo 1650 Tomoacute la orden de San Francisco para consagrarse a las labores de su orden y a la escritura Se dice que con los escritos de Dontildea Ana Mariacutea se podriacutean formar veinte tomos (Serrano y Sanz 268 282) Estas son algunas de sus obras Vida y muerte de Jesucristo Nuestro Sentildeor Vida del Seraacutefico Padre San Francisco de Asiacutes Vida de la iacutenclita Virgen Santa Clara Vida del sutiliacutesimo doctor Juan Duns Escoto

Pero no todas las monjas tuvieron vidas tan dedicadas al estudio y la oracioacuten Loacutegica-mente entre un nuacutemero tan grande de mujeres existioacute de todo y seriacutea un error pensar que todos los conventos femeninos estaban integrados por laquocaacutendidas palomasraquo Una monja en el siglo XVI y XVII teniacutea mucha maacutes fuerza que una mujer ordinaria ya que actuaban en grupo y la entrada a los recintos donde viviacutean estaba permitida solo a mu-jeres Esta situacioacuten las haciacutea mucho maacutes fuertes a todos los niveles que una mujer sola protegida uacutenicamente por su familia laquoLas monjas durante los siglos XVI y XVII lucharon por eludir la clausura y por zafarse del control que los frailes de las secciones masculi-nas de sus congregaciones ejerciacutean sobre ellasraquo (Vigil 230) Soacutelo un antildeo maacutes tarde que dontildea Ana Mariacutea del Costado de Cristo en 1651 y a 12 leguas de Meacutexico nacioacute la sin par Sor Juana Ineacutes de la Cruz hija de don Pedro Manuel de Asbaje natural de Vergara (Vizcaya) y de Dontildea Isabel Ramiacuterez de Santillana hija de espantildeoles (Serrano y Sanz 268 289) Por ser sin lugar a dudas la poeta maacutes importante de su tiempo y probable-mente la maacutes conocida del mundo hispano no profundizaremos en ella Su obra es un canto a la inteligencia y el exponente maacutes destacado de la literatura barroca americana tanto en prosa como en verso Destacareacute simplemente que Sor Juana Ineacutes pese a vivir en un sociedad donde no eran excesivas las libertades concedidas a las mujeres tuvo el caraacutecter y la determinacioacuten de dejarnos las maacutes bellas poesiacuteas amorosas que si bien estuvieron enmarcadas en un ambiente religioso como era de esperar por su condicioacuten

163ESPANtildeOLAS DE ULTRAMAR EN LA HISTORIA Y EN LA LITERATURA

pudieron transcender como unas de las maacutes bellas manifestaciones literarias que hoy en diacutea se conservan Fue su agudeza mental sensibilidad y cultura tal que no fueron suficientes los soacutelidos muros del convento para contener el genio de tan extraordinaria mujer Recordemos sus conocidiacutesimos versos en defensa de las mujeres

Hombres necios que acusaacuteisa la mujer sin razoacutensin ver que sois la ocasioacutende lo mismo que culpaacuteis142

Las metaacuteforas y la delicadeza que emplea en rebatir a su obispo en su laquoRespuesta a sor Filotea de la Cruzraquo no son solamente el epiacutetome del feminismo de su tiempo sino una de las maacutes brillantes manifestaciones del barroco hispano Poesiacutea teatro ensayo y un conocimiento extraordinario de las ciencias claacutesicas de su tiempo hacen de esta mujer un ejemplo extraordinario de las letras universales Ya son cientos los artiacuteculos y libros que se han escrito sobre Sor Juana y no dejan de aparecer tesis doctorales sobre los maacutes diversos temas conectados con la citada autora143 Como nos dice Stephanie Merrim en su documentada obra Early Modern Womenrsquos Writing and Sor Juana Ineacutes de la Cruz

She wrote and published on secular themes as atypical for a nun as human love Her remarkably extensive writings essayed and reenacted most of the (male) poetic dramatic theological and even philosophi-cal discourses of her times in the metropolis making her works a com-pendium of baroque culture in its diversity and syncretism Sor Juana self-creation as a learned women effectively toppled many of the walls in which she was materially enclosed and positioned her within the dynamic world of early modern European culture (xii)

No se debe dejar de mencionar a otras escritoras novohispanas de la eacutepoca que aun-que no fueron tan proliacuteficas y relevantes como Juana Ineacutes de la Cruz dejaron testimo-nio de algunos acontecimientos que tienen intereacutes socioloacutegico o testimonial Este es el caso de Dontildea Mariacutea Estrada Medinilla de igual nombre y apellido que la mujer que acompantildeoacute a las tropas de Corteacutes en su primera entrada a Meacutexico Natural de Meacutexico publicoacute toda su obra a mediados del siglo XVII concentraacutendose principalmente en la lle-gada del Marqueacutes de Villena virrey y capitaacuten general de la Nueva Espantildea a la ciudad de Meacutexico en el antildeo 1640 Escrita en octavas reales la obra trata de las fiestas de toros y cantildeas con que se obsequioacute al citado virrey Fue impresa en Meacutexico en 1641 (Serrano y Sanz 269 402)

Mucho maacutes importante para el presente libro es Dontildea Isabel de Guevara que escribioacute en 1556 la carta en que se expone la ayuda que ofrecieron las mujeres en el descubri-miento y conquista del Riacuteo de la Plata No cabe la menor duda de que esta carta es uno

142 Para una mejor comprensioacuten del caraacutecter de esta excepcional mujer veacutease entre los numeros trabajos publicados Fredo Arias de la Canal Intento de psicoanaacutelisis de Juana Ineacutes y otros ensayos sorjuanistas (Meacutexico Frente de Afirmacioacuten Hispanista 1972) 47

143 Veacuteanse entre otros trabajos Octavio Paz Sor Juana Ineacutes de la Cruz o las trampas de la fe Georgina Sabat de Rivers En busca de Sor Juana Margo Glantz Sor Juana la comparacioacuten y la hipeacuterbole Gerard C Flynn Sor Juana Ineacutes de la Cruz Stephanie Merrim Feminist perspectives on Sor Juana Ineacutes de la Cruz Pamela Kirk Sor Juana Ineacutes de la Cruz religion art and feminism

164 JUAN FRANCISCO MAURA

de los documentos maacutes importantes con que contamos en relacioacuten a la aportacioacuten fe-menina en el proceso de la conquista de Ameacuterica Su importancia viene dada por varios factores Primero es uno de los primeros testimonios mdashsi no el primeromdash en donde se expone abiertamente la indispensable colaboracioacuten de las mujeres en el descubrimien-to y conquista de tierras en el Nuevo Mundo laquoQue si no fuera por ellas todos fueran acabadosraquo En segundo lugar la informacioacuten vertida en estas liacuteneas presenta en parte la manera de pensar de una mujer espantildeola en tales circunstancias Extraordinario tes-timonio de primera mano que nos da una idea de lo que significoacute en muchos casos el valor y entrega constantes de muchas de estas mujeres que auacuten a riesgo de perder sus vidas no dudaron en luchar al lado de los hombres por una causa que consideraban laquocomuacutenraquo

La relevancia histoacuterica de dicha carta hace que merezca ser transcrita en su totali-dad

Carta de dontildea Isabel de Guevara a la princesa gobernadora dontildea Juana exponiendo los trabajos hechos en el descubrimiento y conquista del Riacuteo de la Plata por las mujeres para ayudar a los hombres y pidiendo repartimiento

para su marido Asuncioacuten 2 de julio de 1556

Muy alta y muy poderosa sentildeora

A esta provincia del Riacuteo de la Plata con el primer gobernador de ella don Pedro de Mendoza hemos venido ciertas mujeres entre las cuales ha querido mi ventura que fuese yo la una y como la armada llegase al puerto de Buenos Aires con mil quinientos hombres y les faltase el bastimento fue tamantildea el hambre que a cabo de tres meses murie-ran los mil esta hambre fue tamantildea que ni la de Jerusalem se le puede igualar ni con otra ninguna se puede comparar Vinieron los hombres en tanta flaqueza que todos los trabajos cargaban de las pobres mu-jeres asiacute en lavarles las ropas como en curarles hacerles de comer lo poco que teniacutean limpiarlos hacer centinela rondar los fuegos armar las ballestas cuando algunas veces los indios les veniacutean a dar guerra hasta cometer a poner fuego en los versos y a levantar los soldados los que estaban para ello dar arma por el campo a voces sargentean-do y poniendo en orden los soldados porque en este tiempo como las mujeres nos sustentamos con poca comida no habiacuteamos caiacutedo en tanta flaqueza como los hombres Bien creeraacute V A que fue tanta la so-licitud que tuvieron que si no fuera por ellas todos fueran acabados y si no fuera por la honra de los hombres muchas maacutes cosas escribiera con verdad y los diera a ellos por testigos Esta relacioacuten bien creo que la escribiraacuten a V A maacutes largamente y por eso cesareacute Pasada esta tan peligrosa turbunada determinaron subir el riacuteo arriba asiacute flacos como estaban y en entrada de invierno en dos bergantines los pocos que quedaron vivos y las fatigadas mujeres los curaban y los miraban y les guisaban la comida trayendo la lentildea a cuestas fuera del naviacuteo y animaacutendolos con palabras varoniles que no se dejasen morir que presto dariacutean en tierra de comida metieacutendolos a cuestas en los

165ESPANtildeOLAS DE ULTRAMAR EN LA HISTORIA Y EN LA LITERATURA

bergantines con tanto amor como si fueran sus propios hijos Y como llegamos a una generacioacuten de indios que se llaman tinbues sentildeores de mucho pescado de nuevo los serviacuteamos en buscarles diversos modos de guisados porque no les diese en rostro el pescado a causa de que lo comiacutean sin pan y estaban muy flacos Despueacutes determinaron subir el Paranaacute arriba en demanda de bastimento en el cual viaje pasaron tanto trabajo las desdichadas mujeres milagrosamente quiso Dios que viviesen por ver que en ellas estaba la vida de ellos porque todos los servicios del naviacuteo los tomaban ellas tan a pechos que se teniacutea por afrentada la que menos haciacutea que otra sirviendo de marear la vela y gobernar el naviacuteo y sondar de proa y tomar el remo al soldado que no podiacutea bogar y escotar144 el naviacuteo y poniendo por delante a los soldados que no se desanimasen que para los hombres eran los trabajos verdad es que a estas cosas ellas no eran apremiadas ni las haciacutean de obliga-cioacuten ni las obligaba si solamente la caridad Asiacute llegaron a esta ciudad de la Asuncioacuten que aunque ahora estaacute muy feacutertil de bastimentos en-tonces estaba de ellos muy necesitada que fue necesario que las muje-res volviesen de nuevo a sus trabajos haciendo rosas con sus propias manos rosando y carpiendo y sembrando y recogiendo el bastimento sin ayuda de nadie hasta tanto que los soldados guarecieron de sus fla-quezas y comenzaron a sentildeorear la tierra y adquirir indios e indias de su servicio hasta ponerse en el estado en que ahora estaacute la tierra He querido escribir y traer a la memoria de V A para hacerle saber la ingratitud que conmigo se ha usado en esta tierra porque al presente se repartioacute por la mayor parte de los que hay en ella asiacute de los anti-guos como de los modernos sin que de miacute y de mis trabajos se tuviese ninguna memoria y me dejaron de fuera sin me dar indio ni ninguacuten geacutenero de servicio Mucho me quisiera hallar libre para me ir a presen-tar delante de VA con los servicios que a SM he hecho y los agravios que ahora se me hacen mas no estaacute en mi mano porque estoy casada con un caballero de Sevilla que se llama Pedro de Esquivel que por servir a SM ha sido causa que mis trabajos quedasen tan olvidados y se me renovasen de nuevo porque tres veces le saqueacute el cuchillo de la garganta como allaacute VA sabraacute A que suplico mande me sea dado mi repartimiento perpetuo y en gratificacioacuten de mis servicios [en el origi-nal del AHN Diversos doc 141 dice ademaacutes mande que sea proveydo mi marido de alguacuten cargo conforme a la calidad de su persona pues el de su parte por sus servicios lo merece] lo merece Nuestro sentildeor acre-ciente su Real vida y estado por muy largos antildeos De esta ciudad de la Asuncioacuten y de julio 2 1556 antildeosServidora de V A que sus Reales manos besa

Dontildea Isabel Guevara

144 Sacar agua de un riacuteo acequia o presa

166 JUAN FRANCISCO MAURA

Sobremdash A la muy alta y muy poderosa sentildeora Princesa dontildea Joana Gobernadora de los reinos de Espantildea etc ndash En su Consejo de Indias (Isabel de Guevara 619-21)

Iroacutenicamente la carta teniacutea que llegar a manos de la desdichada heredera del trono de Castilla e hija de los Reyes Catoacutelicos Juana laquola Locaraquo que habiacutea muerto el antildeo an-terior Son profeacuteticas las palabras de esta mujer no soacutelo porque sus hechos personales quedasen en el olvido sino porque incluso se ha borrado la historia de las mujeres en el Nuevo Mundo negando su presencia Por lo menos Isabel Guevara tuvo acceso a una pluma iquestCuaacutentas seriacutean las que ni siquiera sabriacutean escribir

Otra contemporaacutenea fue dontildea Leonor de Iciz que vivioacute durante la segunda mitad del siglo XVI Interesa sobre todo por los sonetos que escribioacute en elogio de Ercilla soldado que participoacute en la conquista de Chile y que se inmortalizoacute con su obra La Araucana (Serrano y Sanz 269 534) Lo mismo hizo Dontildea Bernarda Lintildeaacuten en 1610 autora de otro soneto en memoria del capitaacuten Gaspar Peacuterez de Villagraacute que participoacute en la conquista de Nuevo Meacutexico (Serrano y Sanz 270 14) Los escritos de estas mujeres tratan de de dos de las eacutepicas maacutes dramaacuteticas de la conquista

En el Peruacute y en pleno siglo XVII aparece otra fundadora de conventos Sor Bernardina de Jesuacutes que ademaacutes fue comparada con Santa Teresa por la semejanza de sus laquocartasraquo con las de la santa de Avila Fue fundadora del convento de Tacunga en Quito maacutes tarde destruiacutedo por un terremoto Dice Serrano y Sanz con respecto a su biografiacutea un tanto legendaria que fue carmelita descalza de Lima y hermana de Dontildea Mariacutea Benavides y Esquivel abuela de D Pedro de Peralta Barnuevo (Serrano y Sanz 269 553) Dicen que esta santa se alimentoacute durante treinta antildeos con laquochochos y caacutescaras de naranja hecho tan raro como increiacuteble Cuando fallecioacute reparaban las monjas en ponerle una vara de azucenas porque habiacutea sido casada y aquellas flores aparecieron milagrosamente sobre el cadaacuteverraquo (Serrano y Sanz 269 553)

Otra limentildea del primer cuarto del siglo XVII con reputacioacuten de santa fue Dontildea Luisa Melgarejo En este caso no se trata de una religiosa de oficio sino de la mujer del doctor Juan de Soto La uacutenica diferencia es que dontildea Luisa al parecer teniacutea laquovisiones y reve-lacionesraquo lo que debioacute poner nervioso a maacutes de un miembro del tribunal del laquoSanto Oficioraquo que consideraron sus escritos laquoculpadosraquo De su papel de laquosantaraquo pasa por lo tanto al de laquoposesaraquo o laquoendemoniadaraquo El inquisidor de Lima Gaitaacuten escribioacute un infor-me donde a traveacutes de la opinioacuten puacuteblica y de otras averiguaciones se deciacutea que dontildea Luisa Melgarejo laquomujer santaraquo sabiacutea cuando las almas de los difuntos saliacutean del Purga-torio El diacutea 14 de noviembre de 1623 se decidioacute tomar posesioacuten de todos los cuadernos en los que habiacutea escrito las experiencias de todos sus laquoarrobos suspensiones extasis y revelacionesraquo Estos cuadernos una vez recogidos presentaron toda una serie de al-teraciones borrones adiciones enmiendas incluso diferente letra por lo que despueacutes de haber sido examinados resultaron culpables145 Excelente imaginacioacuten debioacute tener dontildea Luisa Melgarejo la suficiente al parecer para convencer a algunos miembros de la iglesia de que en sus escritos laquohabiacutea algoraquo que mereciacutea la pena Estas cosas ocurriacutean en Lima uno de los centros culturales maacutes importantes de la vida social y poliacutetica en la Ameacuterica espantildeola Lima a comienzos del siglo XVII seguacuten el empadronamiento llevado

145 Serrano y Sanz 270 47 Veacutease J T Medina Historia del tribunal del Santo Oficio de la Inquisicioacuten de Lima (1569-1820) (Santiago Imprenta Gutemberg 1887) Tomo II 34-41

167ESPANtildeOLAS DE ULTRAMAR EN LA HISTORIA Y EN LA LITERATURA

a cabo en 1614 por el marqueacutes de Montesclaros era una ciudad de 25000 habitantes de los que 11000 eran espantildeoles El nuacutemero de religiosos y religiosas llegaba a 1720 (Pittaluga 77)

Se sabe que en la Isla de Santo Domingo durante el siglo XVI nacioacute o al menos resi-dioacute una poeta de ceacutelebre apellido en los aconteceres del Nuevo Mundo Dontildea Elvira de Mendoza de la que se conserva un manuscrito en la Real Academia de la Historia laquoCantares miacuteos que estaacuteis rebeladosraquo Eugenio de Salazar hace un elogio de ella como poeta en un Soneto a la ilustre Poeta y Sentildeora Dontildea Elvira de Mendoza moradora en la ciudad de Santo Domingo (Serrano y Sanz 270 53)

Nacida en Burgos sobre el antildeo 1590 dontildea Luisa de Padilla merece un lugar aparte dentro del grupo de mujeres escritoras de su eacutepoca Por su estilo faacutecil y castizo su no-vedad de pensamientos y su rica erudicioacuten recibioacute el siguiente comentario de Manuel Serrano y Sanz laquoPocas figuras hay en nuestra historia literaria femenil que puedan compararse a esta eminente prosista acaso la maacutes notable de cuantas florecieron en Es-pantildea durante el siglo XVIIraquo (Serrano y Sanz 270 95-96) Este comentario y comparacioacuten deberiacutea ampliarse para que tambieacuten incluyese a laquola historia literaria varonilraquo

Dontildea Luisa fue defensora de la labor que la Inquisicioacuten estaba realizando en la laquolim-piezaraquo de mujeres laquosoldados del demonioraquo que existieron en algunas provincias espa-ntildeolas en aquel tiempo Muchas de las mujeres que combinaban la magia con los po-deres curativos fueron condenadas no solamente por hombres de la Inquisicioacuten sino tambieacuten por mujeres de todas las clases sociales como es el caso de Luisa de Padilla condesa de Aranda En su obra Elogios de la verdad e invectiva contra la mentira preveniacutea contra aquellos que practicaban artes en contra de la religioacuten cristiana La magiacutea negra seguacuten Padilla era la causante de que muriesen casi tantas personas como otras causas naturales habieacutendose descubierto hasta seis mil brujas en Vizcaya y Guipuzcua con-fesando una mujer de un pueblo pequentildeo haber matado con su laquomagiaraquo a ochocientas personas (Perry 31) Eran estos laquomales de ojoraquo y maldiciones seguacuten la autora las causas de que se secasen los pechos de las madres lactantes que se separasen las parejas casa-das y que abortasen las embarazadas (Perry 31)

Si se tiene en cuenta que dontildea Luisa estuvo emparentada con la maacutes rancia aristocra-cia de su tiempo o lo que es lo mismo con algunos de aquellos que en cierta manera dirigiacutean los destinos de Espantildea en aquella eacutepoca (Duques de Lerma Duque de Uceda Marqueacutes de Cueacutellar Conde de Santa Gadea Marqueacutes de Belmonte por citar algunos) se comprenderaacute mejor su identificacioacuten con una institucioacuten que en teoriacutea velaba por la salvaguarda de los valores laquoeternosraquo de una Espantildea destinada a ser la campeona del ca-tolicismo durante los siglos XVI y XVII El padre de dontildea Luisa fue don Martiacuten de Padilla y Manrique extraordinario militar que proboacute su valor contra enemigos moriscos ingle-ses holandeses piratas berberiscos y el renegado genoveacutes Muley Faxad Fue veterano de la batalla de Lepanto donde apresoacute a cuatro galeras y acompantildeoacute con su escuadra a la reina Dontildea Margarita de Austria cuando vino de Geacutenova en 1598 laquoHabiacutea obtenido a 24 de julio de 1587 el tiacutetulo de Conde de Santa Gadea y en 1596 el de Capitaacuten General de la Armada del mar Oceacuteanoraquo (Serrano y Sanz 27095-96)

Por otra parte tambieacuten se sabe que dontildea Luisa participoacute directamente y desde tem-prana edad en la praacutectica de algunas actividades intelectuales como la historia y la arqueologiacutea a la vez que dedicaba su tiempo a virtudes cristianas como la caridad y el socorro de los necesitados (Serrano y Sanz 270 97) Resulta mucho maacutes faacutecil compren-

168 JUAN FRANCISCO MAURA

der la postura ideoloacutegica de esta gran mujer si tienen en cuenta ademaacutes de los factores antes mencionados otros tantos de caraacutecter biograacutefico concernientes a su educacioacuten y matrimonio

Otra escritora fue la mexicana dontildea Mariacutea Casilda Pozo natural de Temestla (Meacutexi-co) Nacida en el mes de abril de 1682 dejoacute escrita su biografiacutea en 16 cuadernos el ma-nuscrito original se encuentra en la biblioteca del colegio de San Gregorio de Meacutexico Fue su confesor el jesuiacuteta Domingo Quiroga que fue quieacuten la incitoacute a escribir su obra (Serrano y Sanz 270 137) Sor Juana de San Antonio aparece a principios del siglo XVII formando parte de un grupo de religiosas espantildeolas que fueron a Manila por la ruta de Meacutexico Ademaacutes de distinguirse por sus cualidades personales su obra interesa por ofrecer informacioacuten testimonial y costumbrista acerca de la forma de vestir de chinos y japoneses (Serrano y Sanz 270 225)

Otra monja esta vez ecuatoriana fue Gertrudis de San Ildefonso Nacida en 1652 profesoacute su vocacioacuten en el convento de Santa Cruz de Quito dejando escrita su vida por mandato de su confesor el padre Martiacuten de la Cruz el cual hizo una biografiacutea laquoen tres gruesos voluacutemenesraquo Gertrudis de San Ildefonso murioacute en 1709 (Serrano y Sanz 270 300) en olor de santidad

Sor Mariacutea Ana Agueda de San Ignacio nacioacute el 3 de marzo de 1695 en la dioacutecesis de la puebla de los Angeles en un rancho del lugar de Santiago Tecaliacute (Serrano y Sanz 270300) Esta monja mexicana escribioacute varias obras durante su vida conventual a lo largo de la cual desempentildeoacute el cargo de priora por muchos antildeos Entre sus obras todas de caraacutecter piacuteo y de laquoamor divinoraquo escribioacute un curioso y laquocopiosoraquo tratado de la Leche virginal de la Soberana Madre de Dios El padre Fr Juan de Villa Saacutenchez hace el siguiente comentario al respecto laquoen que hablando primero en sentido natural de los beneficios que debemos a Nuestra Sentildeora pasa a tratar en sentido miacutestico y alegoacuterico enten-diendo en la leche la doctrinaraquo (Serrano y Sanz 270301) Mexicana fue tambieacuten Sor Petronila de San Joseacute que ejercioacute como abadesa del Real monasterio de Jesuacutes Mariacutea de la ciudad de Meacutexico Escribioacute Vidas de varias religiosas ejemplares obra que tiene su im-portancia ya que al parecer laquoDe esta obra se sirvioacute D Carlos de Siguumlenza y Goacutengora para escribir su Parayso Occidental (Meacutexico 1684) seguacuten eacutel mismo declara en el proacutelogo diciendo lsquoa quien si hay algo bueno en esta historia se le debe todorsquoraquo (Serrano y Sanz 270 354) Menos conocida fue su compatriota Sor Luisa de Santa Catalina natural de Xacona laquopueblo situado en las inmediaciones de Zamora (Meacutexico)raquo siendo bautizada en 1682 Escribioacute Cartas espirituales a su confesor el P Juan Loacutepez de Aguado (Serrano y Sanz 270 361-62)146

Todos estos escritos la mayoriacutea de ellos ignorados por el gran puacuteblico tienen la im-portancia de darnos una perspectiva diferente En otras palabras ensentildearnos la maacutes refinada sensibilidad de muchas mujeres que permanecieron y en su mayoriacutea siguen permaneciendo a laquooscurasraquo de una eacutepoca tan rica de la literatura espantildeola como fue el Siglo de Oro Este siglo fue tambieacuten en su dimensioacuten literaria y artiacutestica patrimonio de la mujer

146 Para profundizar en muchas de estas escritoras hispano-americanas la consulta de la Biblioteca Hispano-Americana de Beristain de Souza resulta de capital importancia

169ESPANtildeOLAS DE ULTRAMAR EN LA HISTORIA Y EN LA LITERATURA

Sor Nada ardores divinos de una monja adolescente escritos ineacutedi-tos de una recieacuten profesa del siglo XVI147

iexclQueacute encantadores son tus amores hermana miacutea espo-sa iexclQueacute deliciosos son tus amores maacutes que el vino Y el aroma de tus perfumes es mejor que el de los baacutelsamos Miel virgen destilan tus labios esposa miel y leche hay en tu lengua y el perfume de tus vestidos es como aroma de incienso (Cantar de los Cantares 4 10-11)

Sor Nada llamada asiacute por humildad seguacuten dice el Indice de manuscritos de la Biblio-teca Nacional de Madrid es uno de los ejemplos maacutes desconocidos e interesantes que tenemos de la poesiacutea y prosa amoroso-religiosa del siglo XVII Hasta la fecha nunca se habiacutea publicado su obra e incluso hasta el antildeo 1995 para mi sorpresa no habiacutea copias microfilmadas de sus manuscritos en la Biblioteca Nacional Serrano y Sanz en su libro Apuntes para una Biblioteca de Escritoras Espantildeolas hace una escueta y pasajera mencioacuten de esta mujer y de su obra (68-69) siendo eso todo lo que hasta ahora se sabiacutea de ella Sus escritos consisten en los siguientes manuscritos

1 laquoEn queacute consiste un verdadero amor de Diosraquo 9 hojas uacutetiles en 4ordm letra del siglo XVII Biblioteca Nacional de Espantildea Manuscrito 1295926

2 laquoPintura del Propio Amorraquo laquoPintura del propio Amorraquo 10 hojas uacutetiles en 4ordm letra del siglo XVII Biblioteca Nacional de Espantildea Manuscrito 1295927

3 laquoEsplicacioacuten sobre en queacute consiste la paz del Almaraquo laquoQuartillas aacute un Alma que padece soledad interiorraquo 7 hojas uacutetiles en 4ordm letra del siglo XVII Biblioteca Nacio-nal de Espantildea Manuscrito 1295828

En cuanto a su persona soacutelo se nos dice que laquose encubrioacute con este seudoacutenimo laquoSor Nadaraquo Esta monja desconocida de origen hispanoamericano posee toda la frescura e ingenuidad de una joven apasionada metida por vocacioacuten u obligacioacuten a ejercer la profesioacuten maacutes comuacuten para mujeres de cierta clase social de su tiempo En sus liacuteneas podemos encontrar un misticismo simple incluso en algunos momentos infantil pero a su vez lleno de una fuerza y sensualidad interior poco comuacuten en escritos de este geacute-nero que desborda los liacutemites del laquoamor divinoraquo a traveacutes de los diaacutelogos entre el Alma y el Esposo Sor Nada consigue proyectar su amor a Dios maacutes allaacute de una experiencia romaacutentica Su experiencia es sincera y genuinamente miacutestica trascendiendo la imita-cioacuten o la propia creacioacuten poeacutetica ficcionalizada (Hatzfeld 30) Algunos pasajes son de un

147 Veacutease mi artiacuteculo Sor Nada ardores divinos de una monja adolescente escritos ineacuteditos de una monja profesa del siglo XVIIraquo Espeacuteculo Revista de estudios literarios 26 (2004) 1-10 Universidad Complutense de Madrid http wwwucmesinfoespeculonumero26sornadahtml

170 JUAN FRANCISCO MAURA

alto contenido eroacutetico con sustantivos y metaacuteforas que recuerdan la maacutes iacutentima unioacuten amorosa en unos casos y el tierno amor maternal en otros

[T]e miro Jesus mio desnudo a las inclemencias del tiempo y ardien-do en puro fuego de Amor por la salud de las Almas y me ensentildeas a que te ame con todo mi corason y puresa de espiritu No atendiendo ni buscando umanos intereses ni a solisitar consuelos ni regalos espi-rituales que suelen empantildear la puresa del noble corason No mi Jesus amable pues antes me ensentildeaste tu puro Amor que desnudo sean [sic] de encaminar mis passos desde el pesebre asta la cuna en donde te miro tan desnudo como el pesebre y todo Sentildeor por mi Amor (Mss 12959 26 hoja 1 v)

El manuscrito (12959 27) de la mencionada serie de tres contiene algunas correccio-nes quizaacute hechas por el confesor o quizaacute por ella misma cuando se dirige con excesiva familiaridad y arrebatado fervor a su Amado148 He escogido el manuscrito (12959 Caja 28) en primer lugar por ser el ejemplo maacutes representativo de su poesiacutea y prosa En este manuscrito encontramos de forma maacutes directa que alegoacuterica toda la frescura de un diaacutelogo entre Jesuacutes y el alma que raya como diriacutea Cervantes laquoa la llana y sin rodeosraquo (667 lib 2 cap 38) con el doloroso y a veces desesperado deseo de la entrega y la unioacuten final con el Amado La ortografiacutea no ha sido corregida respetaacutendose el texto ori-ginal149 Veamos el siguiente fragmento

Mira que te amo con Amor de padre y con Amor de esposo el mas fino y puro enamorado que no tan solo me presio de darte mi mano sino tambien todo mi cuerpo y sangre para que con mi pan de vida te sustentes y te regales a tus anchuras y que con mi propio espiritu vivas en paz como tu lo deseas y que mis amores sean unico alivio en tus trabajos en esta mortal vida pues si esto es asi y sabes que muero por darte vida dime esposa mia de que te fatigas Dame querida tus bras-sos y dime si me amas como yo te amo (Hoja 4)

148 La antologiacutea de Promis ha procurado insertar entre los textos antoloacutegicos algunos que se refieren a la es-critura de mujeres fundamentalmente de aquellos generados en el interior de los espacios conventuales Estos textos se fundan como laquohistorias de vidasraquo y responden casi siempre a los requerimientos de los confesores de las monjas coloniales En este sentido resulta valiosiacutesima la incorporacioacuten de la llamada Relacioacuten autobiograacute-fica de Sor Ursula Suaacuterez como una muestra significativa de la escritura monjil entendida en esta eacutepoca (como tambieacuten en la tradicioacuten europea medieval) inserta en las denominadas laquolabores de manoraquo de las religiosas ya que el texto escrito por mandato se convertiacutea en una suerte de entramado o tejido linguumliacutestico es decir en un nuevo bordado que la mayor parte de las veces el confesor convertido en censor iba haciendo tachando y enmendando En la antologiacutea Promis agrega un texto de Sor Tadea Garciacutea de la Huerta titulado Relacioacuten de la inundacioacuten que hizo el riacuteo Mapocho de la ciudad de Santiago de Chile en el monasterio de Carmelitas titular de San Rafael el diacutea 16 de junio de 1783 se trata de un poema tipo romance escrito en versos octosilaacutebicos y que da cuenta de lo sucedido ese diacutea en el convento (Resentildea de la literatura del reino de Chile de Joseacute Promis Eddie Morales Pintildea httpwwwupaclpublicaciones2002literatura_promishtm)

149 Son frecuentes las faltas ortograacuteficas Una de ellas es el uso constante del seseo La ausencia de acentua-cioacuten y puntuacioacuten exceptuando alguacuten punto o coma arbitrario no seguido casi nunca de mayuacutescula inicial lo mismo que el uso igualmente aribitrario de la h o de b v r q g j m n x etc No olvidemos de la misma forma la laxitud linguumliacutestica existente en el siglo XVII (no sabemos a queacute parte de eacuteste pertenece el manuscrito) asiacute como la joven edad de la monja

171ESPANtildeOLAS DE ULTRAMAR EN LA HISTORIA Y EN LA LITERATURA

Los versos del presente manuscrito poseen la misma fuerza que tiene su prosa Con una estructura estroacutefica indefinida estaacuten aparentemente corregidos por alguien que tu-vo la oportunidad de conocer personalmente a la autora Muy probablemente se trate del padre al que hace referencia al principio del primer manuscrito laquoMandame el Pd que le declare en que consiste un verdadero amor a Diosraquo a continuacioacuten continuacutea con su caracteriacutestica humildad laquo[O]bedesere y dire lo q Dios me inspire segun mi rudesa y simplisidadraquo (Mss 12959 26) En cuanto a la fuerza pasional de esta joven observamos con cierta tristeza coacutemo aparece sublimada en sus escritos con toda la enegiacutea de una joven mujer llena de intensidad y vida pero encerrada en los liacutemites de un convento Veamos un ejemplo en donde responde el Alma en los siguientes versos

O mi enamorado Jesus O mi dulse y tierno amanteO alegria de los sielos O dulse Jesus amable

(Toda Sentildeor me derrito toda Sentildeor me desagoy quiero vivir por ti ea sentildeor abrasadme) [Tachado en el original]

Toda Sentildeor me derrito toda Sentildeor me desagoy quiero morir por vos ea Sentildeor que ya acabo

Ya tus amores me llaman ya tus perfumes me traencon suspiros y agonias Sentildeor hasta que te alcanse

O mi Jesus amoroso no puedo mas dilatarmeya la pasiensia me falta dulse Jesus abrasadme

(No puedo vivir sin vos no puedo mas dilatarmeya la pasiensia me falta dulse) [Tachado en el original]

No puedo vivir sin vos mi dulse Jesus amablepues me teneis echisada siendo mi esposo y mi Padre

Ay que me abraso Ay que me quemo del Amor deJesus nasareno como no tocan y tantildeen a fuego150

Estos versos llenos de arrebato sublimado conectan con toda la tradicioacuten miacutestica es-pantildeola que se remonta a Ramoacuten Llul y que culmina en el maacutes universal de nuestros

150 En toda la fuerza y simbologiacutea del amor maacutes iacutentimo del maacutes alto y sublime placer de la unioacuten de los amantes tal como lo encontramos en el Cantar de los Cantares y en San Juan de la Cruz Leemos en la Biblia

Ya me he quitado la tuacutenica iquestCoacutemo volver a vestirme Ya me he lavado los pies iquestCoacutemo volver a ensuciarlosMi amado metioacute su mano por el agujero (de la llave) y mis entrantildeas se estremecieron por eacutel Me levanteacute para abrir a mi amado Mis manos destilaron mirra y mis dedos mirra exquisita en el pestillo de la cerradura (5 3-5)

Nos ocurre lo mismo con San Juan de la Cruz en su insuperable poema laquoLlama de amor vivaraquo

iexclOh cauterio suaveiexclOh regalada llagaiexclOh mano blanda iexclOh toque delicadoque a vida eterna sabey toda deuda pagaMatando muerte en vida la has trocado

172 JUAN FRANCISCO MAURA

miacutesticos San Juan de la Cruz Esta tradicioacuten se extiende hasta finales del siglo XVII esto es hasta los finales del Barroco siendo un poco maacutes tardiacuteo en la Ameacuterica espantildeola Sin tener como propoacutesito discutir en el presente trabajo a queacute corriente miacutestica pertenece la obra de Sor Nada es necesario resaltar no obstante el hecho de que estaacute escrito por una mujer y ademaacutes de tierna edad El manuscrito 12959 Caja 26 termina con estas pa-labras laquo[T]odas estas boverias escrivi por entretenimiento siendo resien profesa en la religion Sor Nadaraquo Mas no por la juventud de su autora los escritos dejan de tener lo-gradas metaacuteforas imaacutegenes y siacutembolos sacados de la naturaleza La alegoriacutea de la unioacuten matrimonial poseeacute el fuego liacuterico de la maacutes apasionada de las relaciones amorosas vivi-ficada por perfumes flores insectos animales escarchas nieves o abrojos Por lo tanto aunque la narracioacuten destile cierta ingenuidad no carece por ello de un vocabulario rico con el sabor popular de la poesiacutea de los cancioneros y romances de tradicioacuten renacen-tista No ha sido otra mi intencioacuten que la de rescatar del olvido unos escritos en prosa y en verso llenos de frescura y espontaneidad que nos muestran la pasioacuten con que la joven novicia se laquoentrega en cuerpo y almaraquo a los menesteres de su profesioacuten guiada por un padre espiritual en esos primeros antildeos de formacioacuten Esta ha sido la razoacuten por la que presento a continuacioacuten el citado manuscrito en su totalidad

Sor Nada (Mss 1295928)

laquoEsplicacion sobre en que consiste la paz del AlmaraquolaquoQuartillas a un Alma que padece soledad interiorraquo

[7 hojas utiles en 4ordm letra del siglo XVII]

+

Esplicacion sobre en que consiste la paz del Alma

Pareseme segun mi rudo entender que la verdadera paz del Alma con-siste en una muy pura y buena consiencia en un corason liso y bien intensionado en una verdadera rectitud de espiritu en el qual el Alma procura bolar a Dios sin jamas detenerse a respetos umanos ni reparar en que me diran ni de que me censuraran sino me apresuro a seguir a unos entenderes y pareseres dorados en los quales pretende el mundo engantildear y ensuciar si se puede la puresa de un corason unicamente de Dios y de su Santa ley y se lo conserva cristalino con la divina asis-tencia de la gracia y comprendido de su Amor y temor siguiendo la luz divina de tan amante Sentildeor Dios y ombre verdadero con que este ilustrado corason ni se altera ni se mueve por los disfrasses dorados que ase el mundo y sus moradores mayormente con falssas amistades aunque con ellos muestre buena intension Con la misma grasia y luz de Dios conose el buen corason estos disfrasses que le ase el mundo y se retira de todo con espiritu y valor esto sin la menor alterasion sino que en suma paz se retira a buscar a Dios dentro de su mismo corason

173ESPANtildeOLAS DE ULTRAMAR EN LA HISTORIA Y EN LA LITERATURA

y se abrasa con su pura verdad en la qual se le descubren mil interio-res secretos tan solidos puros y verdaderos que la misma Alma queda abismada y de puro grandes no los puede bien comprender ni esplicar pero estos mismos secretos divinos le sirven de espuelas para no solo correr sino bolar con pies de plumas en seguimiento de su bien ama-do Jesus y como este soberano Sentildeor es tan amante de sus espossas las Almas luego que la ve bolar con pies de plumas la sale al encuen-tro en despoblado campo que se deve de llamar Campo de Amor de Dios y el mismo Sentildeor se viene a las manos por ser Dios que nos ama con Amor infinito de Padre benigno y amoroso con que asiendose en contra deso este divino enamorado en lo interyor de el Alma que le busca con ansias de servirle y amarle y en aquella soledad traban una conversasion amorosa y sensilla como la pluma simple de quien esto escrive

Divino enquentroDios y el Alma en la soledad

O Soberano Principe de la paz dise el Alma tus perfumes me traen a ti bolando porque alla en el mundo y sus valedores me pretendian engantildear y entretenerme con pegaminossas amistades que facilmen-te me pudieran envenenar y matarme apartandome de ti Mi dulse Jesus amable mi Redentor Soberano que con tantas ansias me sales al enquentro como siervo [ciervo] erido de mis Amores los quales tu Amor me ofrese para que con tu mismo Amor te ame y te sirva en paz sin perturbarme ni contristarme ni cansarme de padeser pasando si se ofrese por escarchas nieves espinas ni abrojos ni por otros diverssos trabajos ni piedras de contradision que tu me puedes permitir pues por mas que el mar se levante con sus ferosses olas contra mi ni piedras se me tiren al rostro en todo Sentildeor me quieres con serenidad pasifica sin la menor perturbasion Todo Sentildeor quieres que lo tome con Serenidad de espiritu y asi vengo a ti bolando para que mejor me ensentildees a vivir segun las leyes de tu noble condision que me son muy agradables por mas que el mundo me las despresie por segir sus vanidades y torsidas intensiones con apariensias de bien y con este engantildeo y bien me quie-ro mas a mi que no a mi proximo veo que segun mi pareser se pierden muchas Almas y tambien de aquellos que se depresian y pasan por muy espirituales Con que me paresen pocos los que llegan a padeser con desnudes151 de espiritu por tu purisimo Amor y me parese essas se quedan muy atrasadas en la virtud por el peligro de bolver muy atras el paso de modo que se pueden despentildear y pereser en su misma desgra-sia ya por soberbia o por otras enfermedades que se les pega al corason y asi lo pasan como siegos ignorantes sin advertir en sus peligros

151 La letra en cursiva es miacutea

174 JUAN FRANCISCO MAURA

este aquerdo Sentildeor y otros que tu verdad me ensentildea me ase venir uyendo de las paredes del mundo y me vengo a ti Dios mio bolando con las dos Alas del Amor y temor que tu mismo Amor me ofrese tan de gracia y tan de grado que no se duentildeo mio con que lo responder a tan soberano beneficio y finesa de tus entrantildeas de Amorvengo Sentildeor y esposo mio unicamente a descansar en ti pues los peli-gros del camino me an puesto en mucho sobresalto temiendo el per-derte y sin ti perderme para siempre por una eternidad sin fin pues deseo amado mio ganarme ganandote a ti y vivir en ti aora en vida y despues eternamente y estos cuidados me traen fatigada molida y cansada y no podre tener alivio y descanso sino viendome entre tus brassos aunque sea estando en cruz pues ese es el fin de mis deseos vivir y morir en ti ablame mi cordero manso y ensentildeame a que ver-daderamente te ame como fiel esposa ea mi caro amigo dame la ma-no pues sabes Amor mio que en mi no ay mano sin tu misma mano y asi mi Dios y Sentildeor mi Principe Soberano con umilde rendimiento y deseos de alcansarte te suplico me des la mano y me consueles en estos mis trabajos Deseo Sentildeor vivir en paz y los malos amores de mi Naturaleza flaca no me dejan detentar y no quieren por mi desgrasia atropellar con las leyes de tu Amor ni quisiera perturbar mi corason quando me veo con un torvellino de olas y contratiempos que a menu-do me suelen sercar pero si tu Sentildeor me das la mano nada temo sino que me aseguro y vivire en paz sin que me fatiguen los contratiempos pues mi mano en la tuya y mi espiritu en el tuyo por mas borrascas que me envistan no seran bastantes para rendir mi voluntad a la suya bien si para pronunsiar un fiat que resuene bien atras en tus oidos y que en medio de mis fatigas me ponga a cantar tus divinas misericor-dias hea Sentildeor ya pretendo serrar mis labios por no desir mas bove-rias y deseo Sentildeor oir tus palabras de vida eterna abla Sentildeor que tu sierva oye con atension y cuydado mira mi Dios que se me ase tarde y espero con prisa deseando saborearme y aprovecharme de los ecos de tu Santa dotrina pues todas tus palabras saben a eterna vida callen pues mis sentidos y potensias y todo se ponga en paz pues mi dulse y soberano Sentildeor no se escusara de ablar me aun que en mudo silensio hea mi gran Prinsipe de la paz ablame que tus puros amores me traen perdida por estos asperos montes y mis cortos pasos no te pueden dar alcanse mirame mi Dios a tus pies postrada como un vil gusano y me-nor ormiga de la tierraabla Jesus y dise a su esposa el Alma querida esposa mia que me pides y por que te muestras tan fatigada y mal sufrida no vives como corde-rita del campo buscando de mis pechos el sustancial pasto mi Amor no te sustenta y mi grasia te promete eterna vida pues dime amada de que te fatigas y te muestras mal sufrida mira que te amo con Amor de padre y con Amor de esposo el mas fino y puro enamorado que no tan solo me presio de darte mi mano sino tambien todo mi cuerpo y

175ESPANtildeOLAS DE ULTRAMAR EN LA HISTORIA Y EN LA LITERATURA

sangre para que con mi pan de vida te sustentes y te regales a tus an-churas y que con mi propio espiritu vivas en paz como tu lo deseas y que mis amores sean unico alivio en tus trabajos en esta mortal vida pues si esto es asi y sabes que muero por darte vida dime esposa mia de que te fatigas Dame querida tus brassos y dime si me amas como yo te amoResponde el Alma152 Tu mi Dios sabes si yo te amo pues de mi solo se que mis deseos y ansias buelan a ti mas no alcanso a saber si te amo como tu de-seas ser amado y como desconfio tanto de mi y de mis prosederes falssos temo Dios mio perderme y perderte y asi Sentildeor pues no desechas mis Amores y te muestras tan fino en amarme te pido me ensentildees a vivir segun las leyes de tu pura verdad y fina condisionhija mia dise Dios la prueva de un verdadero Amor consiste en sufrir callar y padeser por mi unico Amor y en todo seguir mis pasos sin ja-mas retroseder por mas fragoso que se muestre el camino pues nunca seran tantas las espinas las escarchas ni las nieves ni los vientos bo-rrascosos que te se ofrescan pasar por mi Amor como los que mi tierno y desinteresado Amor paso por ti y siempre con mis pies descalssos y asi hija y esposa mia muestrate costante en seguir lo perfecto de mis passos pues mi braso fuerte sera en ti y peleara por ti y te sera el todo en tus nesesidades y mi Amor te convertira en dulse y suave lo amargo y molesto a la condision de la carrne

Responde el Alma

O mi enamorado Jesus O mi dulse y tierno amanteO alegria de los sielos O dulse Jesus amable

(Toda Sentildeor me derrito toda Sentildeor me desagoy quiero vivir por ti ea sentildeor abrasadme) [Tachado en el original]

Toda Sentildeor me derrito toda Sentildeor me desagoy quiero morir por vos ea Sentildeor que ya acabo

Ya tus amores me llaman ya tus perfumes me traencon suspiros y agonias Sentildeor asta que te alcanse

O mi Jesus amoroso no puedo mas dilatarmeya la pasiensia me falta dulse Jesus abrasadme

(No puedo vivir sin vos no puedo mas dilatarmeya la pasiensia me falta dulse) [Tachado en el original]

No puedo vivir sin vos mi dulse Jesus amablepues me teneis echisada siendo mi esposo y mi Padre

152 La aparicioacuten de una mayuacutescula al principio de una oracioacuten es algo totalmente arbitrario en este ma-nuscrito dada la libertad ortograacutefica de la autora Como se puede observar en la mayor parte de las veces no es el caso

176 JUAN FRANCISCO MAURA

Ay que me abraso Ay que me quemo del Amor deJesus nasareno como no tocan y tantildeen a fuego

Responde Jesus Hija mia tus simples vozes oygo y aunque resuenan bien a mis oidos pero te deseo mas mansa y pasifica en tus fervores ya sabes que no siempre as de vivir en mantillas ni a los pechos de tu Madre por que es rason que padescas con espiritu fuerte como mu-jer valerosa por que a una esposa del Rey soberano y prinsipe de la paz no le estan bien chiquerias ni fervores de nintildea malcriada y ya es ora que la destete su Madre la Naturaleza y que empesando su nueva vida camine con el favor de mi grasia sigiendo mis passos de eterna vida esto con sus pies descalssos segun mis leyes de Amor puro y desinteresado lo tienen ordenado153 y vivir en paz como lo deje en-cargado a mis apostoles Santos repitiendoles varias vezes Vivir en pas y caridad esto es un vivir en Dios y Dios en el Alma y asi hija mia el Alma que vive en paz vive en mi Como mis cortesanos en el cielo y pues me pides que te ensentildee a vivir segun las leyes de mi condision Repito el desir que te debes mostrar sufrida en todo tiempo y estado sin permitir en tu corason que ni aun los fervores se adelanten con estremos ni ademanes sino atiende y aprende de mi purisima Madre pues siempre la veras si bien lo consideras que mientras vivio en el mundo en todos sus trabajos se mostro firme fuerte costante como piedra diamante Pues mirandome nintildeo entre sus brasos desnudo en el pesebre desnudo y crusificado en los brassos de una cruz En estos y otros passos no se mudo su rostro sino que en suma serenidad y pasifico corason toda se sacrificaba enteramente en los brassos de mi Amor y rendido su corason y voluntad en la de mi eterno Padre por ejemplo te la doy y deseo que aprendas de sus nobles calidades pues te aseguro carisima que las leyes de mi condision y pura verdad todo lo allaras enserrado en el corason de mi purisima Madre sedle fiel y descansaras en paz

+

Quartillas a un alma que padese soledad interior

1Un Alma afligida y tristese ve en un campo desiertay en el su esposo la tieneAtormentada y sedienta

153 Es a traveacutes de estas liacuteneas lo que hace suponer que la autora de este diaacutelogo amoroso entre el Alma y Je-suacutes es novicia esto es laquoque estaacute empesando su nueva vidaraquo En las mismas liacuteneas una vez maacutes se hace alusioacuten al laquodesteteraquo de su vida civil laquoa una esposa del Rey soberano y principe de la paz no le estan bien chiquerias ni fervores de nintildea malcriada y ya es ora que la destete su Madre la naturalesaraquo (fol 5)

177ESPANtildeOLAS DE ULTRAMAR EN LA HISTORIA Y EN LA LITERATURA

2Pendiente se ve en el AyreSolo un hilo la sustentasin tocar el pie en el sueloporque del no tome tierra

3Mirandola esta yto a ytoaquel sol que la atraviesay la enviste con sus rayosmas ella no pestantildeea

4Como sigarra padese y como a tal se atormentabatiendo sus mismas Alasy el corason se atraviesa

5Con penas sustos temoresquando se mira assi mesmasin tener valor en nadaporque es la misma flaquesa

6Pero el Amor de su esposotoda su atension le llevay la pone en un abismopero cubierto en tiniebla

7Desea dar algun bueloy subir con ligeresapero se mira travadacon una fuerte cadena

8Clama suspira y padeseMas del todo se sujetaRindiendo su voluntadA la divina clemencia

9Los enemigos del AlmaCruelmente le asen guerray ella aunque firme y constantelos reselos la atormentan

178 JUAN FRANCISCO MAURA

10de todos modos padeseaunque gosa la asistensiadel divino esposo amadoque en su interior se recrea

11Solo de verla penary con verla tan serenadise resibe mil gustosde su sigarra pequentildea

12Le sabe el mundo a mil yelesy su trato le atormentaviendo en el mil falsedadesque todas saben a tierra

13Para poderse librardeja de correr y buelacon las Alas del Amory el mismo Amor se la lleva

Una vida dedicada a un amor divino un amor que le haraacute llenar un buen nuacutemero de cuartillas dedicadas a tan alta empresa Se desconoce si la vocacioacuten de Sor Nada con-tinuoacute con tanta intensidad el resto de sus diacuteas Ciertamente la vida en el covento no era faacutecil En algunos casos la experiencia era traumaacutetica incluso fatal para algunas de las adolescentes de la Ameacuterica Espantildeola Las reglas del claustro eran severas por varias razones Estas joacutevenes si no teniacutean el permiso de la superiora no podiacutean recibir visitas no podiacutean volver a sus casas su correspondencia era censuraba y no podiacutean salir del periacutemetro conventual Igualmente se levantaban antes del amanecer para oir misa tra-bajaban el resto del diacutea y lo maacutes interesante es que muchas veces esta vida era aceptada por muchas

Page 20: Tercera parte: Mujeres en la vida intelectual - …parnaseo.uv.es/Editorial/Maura/TerceraParte.pdf · La Biblia, por su parte, hace repetidas menciones de la mujer y sobre el comporta-

150 JUAN FRANCISCO MAURA

fue a las colonias de ultramar y tomoacute raices especialmente en el Peruacute (Martiacuten 317-18)

En un reciente estudio sobre la educacioacuten de la mujer en la Ameacuterica virreinal apare-cen algunos ejemplos significativos de mujeres espantildeolas que consagraron gran parte de sus vidas a la tarea docente Dentro del proceso educativo de las espantildeolas que fueron a las Indias destaca el papel de dontildea Catalina de Bustamante Joseacute de Jesuacutes Vega y Ma-riacutea Luisa Caacuterdenas de Vega dicen en su obra Ameacuterica Virreinal La Educacioacuten de la mujer que esta mujer pocos antildeos despueacutes del descubrimiento del Nuevo Mundo se dedicoacute a trabajar en favor de los indios aunque por desgracia su nombre y sus hechos en la labor docente hayan sido ignorados por los historiadores modernos (Vega 12-13)

Son varias las veces que se nombra a Catalina de Bustamante en el citado estudio y varias las fuentes antiguas en que se recoge la presencia de tan distinguida laquomatrona muy honrada y de buen ejemploraquo de la que ya hablaba Zumaacuterraga y sobre la que se hizo un informe enviado a Carlos V describiendo sus actividades en la Nueva Espantildea firmado por cuatro de los misioneros maacutes conocidos de Meacutexico

El informe dice que los franciscanos de Texcoco acababan de cons-truir un nuevo monasterio y cedido el antiguo A una honrada y honesta y muy virtuosa matrona que se dice Catalina de Bustamante para que ende instruyese a las hijas de los sentildeores de la comarcala cual con el favor de Dios y limosnas que don Hernando [Corteacutes] les haciacutea para su sustentacioacuten [teniacutea en esa casa-hogar] hasta trescientas mujeres antes maacutes que menos (Vega 14)

Estas laquocasas-hogarraquo no estaban regentadas necesariamente por monjas sino por lo que llamaban laquobeatasraquo mujeres que sin estar estar sujetas a la autoridad eclesiaacutestica se dedicaban a un laquolucro honestoraquo Llamadas tambieacuten laquobeateriosraquo eran diferentes a los conventos de monjas y constituiacutean las primeras escuelas de la mujer en la Nueva Espa-ntildea (Vega 20-21) Fue gracias al ejemplo de mujeres como Catalina de Bustamante que dedicaron sus vidas a la educacioacuten de los indiacutegenas que existiesen otras continuando su ejemplo Motoliniacutea dice claramente que laquode ese primer encerramiento (el de Texcoco regentado por Catalina) salieron otras honestas y muy virtuosas duentildeas que ensentildeaban a las maacutes menudasraquo (Vega 23)

Pero dontildea Catalina de Bustamante pese a ser una singular mujer y la iniciadora de la educacioacuten de la mujer en Meacutexico no fue un caso aislado corresponde maacutes bien a un patroacuten al que se ajustaron muchas de las pioneras de la Nueva Espantildea que sembraron instituciones de educacioacuten de la mujer En 1530 unos antildeos maacutes tarde aparecioacute una de las grandes protectoras de la instruccioacuten femenina en Ameacuterica La emperatriz Isabel de Portugal (Vega 24)

Desde comienzos de la conquista fueron varios los centros docentes regentados por mujeres en los que la ensentildeanza no estaba impartida por monjas Una de las institucio-nes maacutes sobresalientes del sistema educativo fue el Colegio de Nintildeas que se establecioacute en la ciudad de Meacutexico a principios del siglo XVI con maestras que no eran monjas Estas seglares conocidas comunmente como laquomigasraquo eran las descendientes de las antiguas beatas Su ubicacioacuten permanente fue determinada en 1548 lugar que serviriacutea de escue-la ininterrumpidamente hasta 1862 cuando el edificio fue convertido en bodega (Vega 60) No se debe perder de vista que no soacutelo por el hecho de llevar una vida secular se

151ESPANtildeOLAS DE ULTRAMAR EN LA HISTORIA Y EN LA LITERATURA

gozaba de maacutes privilegios Era maacutes bien al contrario En las carreteras las mujeres segla-res no inspiraban el mismo respeto que las monjas que ademaacutes teniacutean contacto cons-tante con personas de los dos sexos no pertenecientes a la Iglesia (Arenal 297) Ademaacutes dentro de las murallas del convento desapareciacutean muchas de las barreras sociales que limitaban a la mujer de esta eacutepoca

La presencia femenina y la monarquiacutea

Pues iquestcoacutemo sabes tuacute preguntoacute don Quijote que los grandes llevan detraacutes de siacute a sus caballerizos Yo seacute lo direacute respondioacute Sancho Los antildeos pasados es-tuve un mes en la corte y alliacute vi que paseaacutendose un se-ntildeor muy pequentildeo que deciacutean que era muy grande un hombre le seguiacutea a caballo a todas las vueltas que daba que no pareciacutea que era su rabo Pregunteacute que coacutemo aquel hombre no se juntaba con el otro sino que siempre anda-ba tras deacutel Respondieacuterome que era su caballerizo y que era uso de grandes llevar tras siacute a los tales Desde enton-ces lo seacute tan bien que nunca se me ha olvidado (Cervan-tes Don Quijote)

Los monarcas espantildeoles fueron conscientes de que sin la presencia femenina difiacute-cilmente se podriacutea solidificar una conquista a todos los niveles La mayor parte de los virreyes y altos cargos trajeron a sus mujeres con ellos y en las ciudades principales de Hispano-Ameacuterica como la ciudad de Meacutexico Guatemala Lima o Potosiacute habiacutea mujeres que disfrutaban de una esmerada educacioacuten (gramaacutetica latiacuten poesiacutea historia muacutesica) Esto dariacutea origen a una elegante y hasta cierto punto sofisticada sociedad en la que las mujeres tomaron parte en asuntos maacutes importantes que los que sus homoacutelogas toma-ran en las colonias portuguesas laquoThere were brilliant vice-regal courts at Mexico City and Lima far exceeding anything that could be found in Portuguese or English America during the seventeenth centuryraquo (Boxer 39) Las estadiacutesticas con las que contamos hoy no soacutelo demuestran que las mujeres llegaron al Nuevo Mundo en respetables porcen-tajes sino que ademaacutes tuvieron una participacioacuten activa llegando a intervenir en algu-nos casos en las liacuteneas de vanguardia Resulta difiacutecil aproximarse al estado de aacutenimo de aquellas mujeres que vivieron en eacutepocas tan lejanas Para ello es necesario indagar en los documentos de la eacutepoca para lograr rescatar del pasado todos esos tesoros de la historia muchas veces tergiversados y manipulados con el fin de que sirvan a propoacutesi-tos actuales Es en los viejos manuscritos donde queda testimoniada su presencia tan rica en dolores tragedias y por queacute no en amores Fue la llegada de estas mujeres una brisa de esperanza y de ilusioacuten para aquellos que ya estaban en las tierras de ultramar y

152 JUAN FRANCISCO MAURA

veiacutean venir de su propia tierra aquello que maacutes antildeoraban amantes madres hermanas Un haacutelito de vida y poesiacutea que suavizaba las costumbres de estos rudos y romaacutenticos pioneros laquoporque para ser hombres de tales empresas algo de romaacutentico debioacute de existir en ellos y que es tan propio del espantildeol y abandonariacutean en brazos tan gentiles sus bruscos modales que habiacutean adquirido en aacutespero contacto en selvas y montantildeasraquo (Villafantildee 125)

Hoy sabemos que en la normativa oficial de la Espantildea del siglo XVI y XVII se favoreciacutea el paso de mujeres al Nuevo Mundo Afirmar lo contrario no solamente es falso sino que implica un desconocimiento total de los primeros dos siglos de la colonizacioacuten espantildeola La presencia de estas mujeres espantildeolas fue efectiva laquolas disposiciones al respecto demuestran claramente que se teniacutea especial intereacutes en su arraigo y que se tra-taba de defender su posicioacuten de mujeres casadas con conquistadores y colonizadoresraquo (Villafantildee 126) Los monarcas comprendiacutean que era praacutecticamente imposible que los hombres viviesen sin mujeres y que de ser asiacute era de esperar que se cometiesen abusos con las indias lo que incidiriacutea en la moral social y en el buen gobierno de la colonia Ademaacutes sin un asentamiento definitivo con hogares y familias difiacutecilmente se podriacutea llevar a cabo una presencia permanente en las nuevas colonias (Orsquo Sullivan-Beare 45)

Empezando por los Reyes Catoacutelicos la preocupacioacuten de que en las colonias se esta-bleciesen nuacutecleos que tuviesen como base la familia cristiana fue clara Las capitulacio-nes que a este efecto se hicieron entre los conquistadores y la Corona fueron nume-rosas La efectuada entre Rodrigo de Baacutestidas y Carlos V puede ser un buen ejemplo Fechada en Valladolid el 6 de noviembre de 1524 muestra el propoacutesito de Baacutestidas de establecer una colonia permanente en la desembocadura del riacuteo Magdalena en el terri-torio que hoy vendriacutea a corresponder a Colombia El documento firmado por el Empe-rador comienza asiacute

El Rey Por cuanto por parte de vos Rodrigo de Baacutestidas vecino de la ciudad de Santo Domingo de la Isla Espantildeola Me fueacute fecha relacioacuten que por servicio de la Catholica Reyna Mi Sentildeora e Nuestro os ofre-ceacuteis de poblar e poblariades la provincia e puerto de Santa Marta que en Castilla de Oro llamada la Tierra Firme e que la poblariades dentro de dos antildeos siguientes haciendo en ella un pueblo en que no menos haya en eacutel al presente cincuenta vezinos que los quince de ellos sean casados y tengan consigo a sus mujeres y que lo teniades fecho dentro de dos antildeos y de hoy en adelante lo maacutes que fuese posible asiacute de cris-tianos espantildeoles como de indios (Restrepo 1 30)

De igual manera el priacutencipe Felipe (futuro Felipe II) en las capitulaciones establecidas en 1547 con Juan de Sanabria para que eacuteste fuese como gobernador y capitaacuten general de la dicha provincia escribe lo siguiente laquoPrimeramente que seais obligado e os obligeis a llevar destos Reynos de Castilla a la dicha provincia del Rio de la Plata cien casados con sus mujeres e hijos para poblar la dicha provincia y con ellos llevareis a vuestra muger e hijos (CDI de Ameacuterica y Oceaniacutea 23 119)

En numerosas ocasiones se pone de manifiesto el apoyo de la monarquiacutea a la emigra-cioacuten femenina tantas que difiacutecilmente se podriacutean enumerar todos los casos Lo cierto es que la legislatura vigente favoreciacutea la emigracioacuten y traslado de mujeres con toda una se-

153ESPANtildeOLAS DE ULTRAMAR EN LA HISTORIA Y EN LA LITERATURA

rie de alicientes137 sobre todo si eacutestas estaban casadas pasaje para llevar a las familias franquicia de derecho para los artiacuteculos que portasen consigo favoritismo en cargos destinos y contrataciones a aquellos que pasasen con sus mujeres incluyendo ademaacutes de los castellanos y leoneses a suacutebditos de otras partes de la corona incluso genoveses y portugueses si estos veniacutean acompantildeados de sus consortes (Fernaacutendez Duro 15-16)

Incluso se llegoacute a imponer penas a aquellos hombres casados que no llevasen a sus mujeres con ellos a Indias en el teacutermino de un antildeo El mismo emperador en una ceacutedula otorgada al virrey de la Nueva Espantildea le recomendaba que laquoprocurase persuadir a ca-sarse a los solteros que estuviesen en edad y situacioacuten de hacerloraquo prometieacutendoles que al efectuar el matrimonio seriacutean preferidos en el reparto de indios En la isla de San Juan de Puerto Rico los cargos oficiales y oficios puacuteblicos debiacutean de ser desempentildeados por los casados en primer lugar En Meacutexico ocurrioacute lo mismo con los cargos de corregido-res (Konetzke laquoemigracioacutenraquo 140-41) Felipe II al igual que sus antecesores y sucesores reiteraraacute y justificaraacute los beneficios de los que seraacuten acreedores aquellos que tengan allaacute a sus mujeres laquoque los que han servido en los descubrimientos de las dichas Indias y tambieacuten los que ayudan a la poblacioacuten dellas que tienen allaacute sus mugeres sean preferi-dos en los aprouechamientos qualesquierraquo mandando que despueacutes de los conquistado-res se tuviera en cuenta para la laquoprovisioacuten de los corregimientosraquo a los colonos casados siempre que estuvieran capacitados para dichos cargos (Konetzke laquoemigracioacutenraquo 141)

Las disposiciones en favor del matrimonio son claras ya sea por medio de un favo-ritismo manifiesto como en los casos antes citados o mediante medidas de cohercioacuten para que esta poliacutetica se llevase a cabo Don Sebastiaacuten Ramiacuterez de Fuenleal obispo de Santo Domingo y presidente de la Audiencia de Meacutexico propuso que a aquellos enco-menderos que no estuviesen casados y que no hubiesen tomado parte en la conquista se les quitase los indios concedidos con la obligacioacuten de devolveacuterselos si en el plazo de un antildeo habiacutean contraiacutedo matrimonio (Konetzke laquoemigracioacutenraquo 142-43) Por supuesto hubo excepciones a estas reglas En algunos casos ni la mujer teniacutea especial intereacutes en vivir junto con su marido en las Ameacutericas ni el marido queriacutea ir a buscar a su mujer pasado el plazo de un antildeo En el presente documento y de forma excepcional las auto-ridades reales protegen a los conyuges para que puedan seguir viviendo separados en continentes diferentes

Nuestras justicias de la ysla de Cubagua e otras qualesquier de las nuestras Yndias yslas e tierra firme del mar oceacuteano e a cada uno e qualquier de vos a quieacuten esta mi ceacutedula fuese mostrada por parte de Alonso de Tapia nuestro veedor de la provincia de Paria me ha sido hecha relacioacuten que ha mucho tiempo que reside en esas partes donde nos ha servido en lo que se ha ofrecido e que agora vos otros le apre-miaacuteis a que venga o embiacutee a estos Reinos por su muger lo cual no puede al presente hazer a causa de no ter posibilidad para ello a mi me ha suplicado vos mandase que no le compeliacuteesedes ny apremiaacutesedes a que viniese o enviase por la dicha su muger y dieacutesedes por libres los fiadores que tenyades para que dentro de un antildeo embiariacutea o verniacutea por

137 Reales Ceacutedulas de los antildeos 1502 y 1503 Academia de la Historia Coleccioacuten Muntildeoz tomo 75 fols 209 y 220 citado por Fernaacutendez Duro 15

154 JUAN FRANCISCO MAURA

ella o como la mi merced fuese lo cual visto por los de nuestro consejo juntamente con una peticioacuten presentada por dontildea Mariacutea Gudiel muger del dicho Alonso de Tapia por la cual nos suplica lo mismo que acor-dado que debiacutea mandar esta mi ceacutedula para vos por la qual vos mando que no compelaacuteis ni apremieacuteis al dicho Alonso de Tapia a que venga ni enviacutee a estos reinos por la dicha su muger si no fuere a que la pro-vea de lo que fuere necesario para su mantenimiento y deys por libres quales quier fianzas que sobre ello haya dado e no fagades ende al por alguna manera Firmado en la villa de Valladolid a VII diacuteas del mes de febrero de mil e quinientos e treinta y siete antildeos yo el licenciado Con-de de Samano y sentildealada del cardenal Beltraacuten y Carbajal [Aparte en letra pequentildea] Este diacutea se despachoacute una provisioacuten por la cuaacutel su Mag hizo merced a Alonso de Tapia de la veedoriacutea de la provincia de Paria por muerte de Garciacutea de Aguilar con las clausulas ordinarias y con el mismo salario que teniacutea Aguilar Firmado del emperador y de Beltraacuten y Bernal y Velaacutezquez El Rey (Registro de disposiciones Riacuteo Marantildeoacuten AGI Indiferente General Legajo 416 libro 2 Fols 94v y 95r)

El punto maacutes interesante a destacar de todas estas disposiciones oficiales en cuanto a la emigracioacuten femenina al Nuevo Mundo no es otro que la libertad que se da a la mujer de decidir si quiere o no casada o sin casar trasladarse al nuevo continente no como una imposicioacuten sino como un precepto laquoel espiacuteritu de las disposiciones en el sentido de asegurar la vida marital de los casados significa que la mujer que su marido invita a pa-sar a las Indias puede negarseraquo (Villafantildee 127) Habriacutea que ver las opciones laquorealesraquo ade-maacutes de las legales y econoacutemicas que le quedaban a la mujer si tomaba esta decisioacuten

El saber la libertad de eleccioacuten que estas mujeres teniacutean de antemano antes de aden-trarse en las interminables penalidades y aventuras que los viajes de la navegacioacuten tran-soceaacutenica suponiacutean hace que sus hechos y esfuerzos cobren auacuten maacutes relieve En nume-rosas ocasiones estas mujeres cruzaron el oceacuteano una y maacutes veces sin otro motivo que el de defender los derechos e intereses de los suyos Lo que resulta maacutes valioso de todo esto es que lo hicieran por propia iniciativa arriesgando sus vidas para que se hiciese justicia y para que no les faltase lo necesario a aquellos que estaban en la otra orilla Las autoridades vigentes conocedoras de los vaciacuteos legales existentes en las nuevas colo-nias se apresuraron a poner en vigor aquellas normas que redundaran en el beneficio de los menos favorecidos por las circunstancias La institucioacuten del matrimonio cuya trans-cendencia es fundamental en la vida juriacutedica y social de la mujer tuvo que ser legislada en Ameacuterica con una serie de nuevas disposiciones agregados modificaciones y aclara-ciones Asiacute pues la legislacioacuten de base espantildeola tuvo que sufrir en tierras americanas esta serie de cambios por motivos poliacuteticos y sociales (Villafantildee 126)

Para hacer un sumario de lo dispuesto hasta el siglo XVI en cuanto a la legislacioacuten de las mujeres que teniacutean familia o intereses en Indias merece la pena mencionar que existieron una serie de disposiciones que protegiacutean a las mujeres para que eacutestas no se viesen abandonadas por sus maridos En un epiacutegrafe de la Recopilacioacuten de 1680 (libro VII tiacutetulo 3) se deja ver claramente la preocupacioacuten de las autoridades en este asunto laquoDe los casados en Espantildea e Indias que estaacuten ausentes de sus mujeres y esposasraquo (Vi-llafantildee 126-27)

155ESPANtildeOLAS DE ULTRAMAR EN LA HISTORIA Y EN LA LITERATURA

La lista de disposiciones se hace interminable En los reinados de Fernando el Catoacute-lico Carlos V Felipe II Felipe III o incluso Carlos II la insistencia es constante La ra-zoacuten de esta insistencia seriacutea bastante obvia dado que con un oceacuteano por medio seriacutean muchos los que se aprovechasen de llevar una doble vida marital sin el estricto control y vigilancia de sus mujeres que se encontraban en la peniacutensula La ley XXVII libro IX tiacutetulo XXVI determina laquoDeclaramos por personas prohibidas para embarcarse y pasar a las Indias todos los casados y desposados en estos reinos lsquosino llevaren con ellos sus mujeresrsquo aunque sean virreyes oidores gobernadores o nos fuesen a servir en cual-quier cargo y oficios de Guerra Justicia y Hacienda porque es nuestra voluntad que todos los susodichos lleven a sus mujeresraquo (Villafantildee 127) laquoLos eclesiaacutesticos eran los en-cargados de dar cuenta a los tribunales competentes de aquellos que estando casados permaneciacutean en Indias sin sus mujeres Son reiteradas las disposiciones de Fernando el Catoacutelico en este sentidoraquo138 En 1514 el rey don Fernando ordena en una provisioacuten para la isla Espantildeola laquodoy licencia eacute facultad aacute cualquier persona naturales de estos Reynos para libremente se puedan casar con mujeres naturales de esa dicha ysla sin tener que incurrir por ello en pena algunaraquo (Villafantildee 129)

No se debe olvidar tampoco a aquellas mujeres que decidieron pasar a las laquonuevas tierrasraquo solteras Estas mujeres tambieacuten tuvieron un papel importante en el desarrollo de las nuevas colonias Los organismos espantildeoles del momento como los mandatarios indianos y todos los cronistas no dejaron pasar desapercibida la importancia social de estas mujeres en la poliacutetica de poblamiento laquo[E]s cierto que los pueblos de Indias nuevamente poblados no se tienen por fijos o estables ni permanentes hasta tanto que mujeres espantildeolas entren en ellos y los encomenderos y conquistadores se casen por muchas causas y respetos buenos y saludables que para ello hayraquo (Villafantildee 126-27)

Si la intencioacuten era la de una presencia permanente en las tierras americanas la mujer soltera que pasase a ellas siempre seriacutea un motivo maacutes para el colono o conquistador de continuar en el mismo suelo Se podriacutea empezar una familia si asiacute se quisiese sin tener que pensar en volver a la metroacutepoli ya fuese a disfrutar de los bienes adquiridos o a laquobuscarraquo una esposa El problema aparecioacute cuando se produjo un exceso de mujeres solteras lo que de alguna manera alteroacute la estructura social existente ya que no habiacutea muchas opciones para ellas aparte del matrimonio o el convento

En consideracioacuten a que la experiencia habiacutea demostrado que un exce-sivo nuacutemero de mujeres ejerciacutea perniciosa influencia sobre la moral y las costumbres se suplicaba al rey no otorgase a aquellas tantas auto-rizaciones para emigrar al Peruacute La ciudad de la Plata fundada en 1538 emite en 1577 un informe en el que se expone la urgente necesidad de que se funde un convento de monjas pues en el territorio de las Au-diencias de Los Charcas existiacutea un gran nuacutemero de muchachas que no pudieacutendose casar se hallaban en gran peligro de perderse (Konetzke laquoemigracioacutenraquo 149)

138 Solorzano Pereira Juan de Libro Primero de la Recopilacioacuten de las Ceacutedulas Reales Cartas y Provisiones y Or-denanzas Reales Noticia preliminar de Ricardo Levenne Universidad de Buenos Aires Facultad de Derecho Y Ciencias Sociales Pub del Instituto de Historia del Derecho Argentino Coleccioacuten de Textos y Documentos para la Historia del Derecho Argentino t V Buenos Aires Imp de la Universidad de Buenos Aires 1945 (Li-bro I Ley 10 laquoQue los Espantildeoles puedan casar con Indias y al contrario a su voluntadraquo t2 p 138 citado en Villafantildee 129

156 JUAN FRANCISCO MAURA

Entristece ver coacutemo se manejan las cifras de estas mujeres como si de ganado o de bienes suntuarios se tratase Por otra parte existieron irregularidades como la de pobla-doras espantildeolas que vivieron amancebadas con hombres que ya estaban casados en la peniacutensula Normalmente esto ocurriacutea cuando la estancia del conquistador se prolonga-ba maacutes de lo debido en lugares donde habiacutea pocas espantildeolas Muchas veces nacieron hijos de estas uniones que hicieron auacuten maacutes difiacutecil la situacioacuten para las mujeres que esperaban en Espantildea a un marido que ya no teniacutea ningunas intenciones de volver En los juicios de residencia los documentos acostumbran a citar estos casos ya que era parte de su obligacioacuten castigar las irregularidades extramatrimoniales y salvaguardar las buenas costumbres familiares que con tanto intereacutes se deseaba mantener laquoUn ejemplo nos lo da la isla de Cuba donde en 1532 viven con hombres casados Olalla Hernaacuten-dez Santillana Aranda lsquola Cordobesarsquo Catalina de Leoacuten Catalina Saacutenchez Francisca Hernaacutendez Mayor de Azebedo Juana de Valeros y lsquouna mujer que estaba en casa de Ayalarsquoraquo (Borges 416)

Estos casos no fueron aislados y mucho menos en Cuba centro neuraacutelgico de todo el movimiento de ida y vuelta entre la metroacutepoli y el Nuevo Mundo Estas ocho acusa-ciones por lo tanto no tienen porqueacute considerarse extraordinarias y menos en el lugar maacutes cosmopolita de las Indias en esos momentos al que llegaban flotas a cada momen-to Al parecer existieron casos parecidos en el Riacuteo de la Plata Peruacute y Nueva Espantildea (Ratcliffe 347) El margen legal para que estas mujeres viviesen como quisiesen estuvo limitado por una moral que veiacutea uacutenicamente en el matrimonio o el convento una salida laquovaacutelidaraquo para que fueran aceptadas socialmente Los hombres en iguales circunstan-cias fueron juzgados por una laquomoralraquo mucho maacutes permisiva

La mujer y el cuerpo eclesiaacutestico

Pues iquestquieacuten diablos os traiacutedo aquiacute dijo don Quijote siendo hombre de la iglesia iquestQuieacuten sentildeor replicoacute el caiacutedo laquomi desventuraraquo Pues otra mayor os amenaza dijo don Quijote sino me satisfaceacuteis a todo cuanto primero os pregunteacute (Cervantes Don Quijote )

Otro factor a tener en cuenta en un anaacutelisis sobre la presencia de la mujer en el Nuevo Mundo es el que tiene que ver con la institucioacuten maacutes importante de las que llegaron desde Europa la iglesia catoacutelica Sin aacutenimo de criticar a tan compleja institucioacuten res-ponsable de gran parte de los aconteceres en el Nuevo Mundo vale la pena analizar algunas singularidades Muchos de sus miembros fueron grandes ejemplos de valor e inteligencia a la hora de tratar los maacutes variados y escabrosos asuntos con los que se encontraron los cristianos en la otra orilla durante este periacuteodo Se debe resaltar tam-

157ESPANtildeOLAS DE ULTRAMAR EN LA HISTORIA Y EN LA LITERATURA

bieacuten su caraacutecter medieval en la manera de hacer apostolado y de entender y tratar a los potenciales cristianos Si se tienen en cuenta los privilegios y prerrogativas que algunas de las altas jerarquiacuteas eclesiaacutesticas tuvieron no seriacutea superfluo estimar que un respeta-ble porcentaje de la poblacioacuten de origen laquodudosoraquo muy bien podiacutea venir de la misma iglesia Fueron muchas las viacutectimas y muchas las familias divididas por un padre laquoinvi-sibleraquo Gran parte de los hijos o laquosobrinosraquo de estos sacerdotes pasaron a ocupar cargos similares incluyendo los privilegios que estos cargos llevaban consigo como si se trata-se de cualquier otro oficio gremial transmitido generacionalmente regla tan comuacuten en la Europa medieval Todaviacutea a finales del siglo XIII en Espantildea los derechos de los hijos y nietos de los sacerdotes estaban protegidos por la ley sin que hubiesen podido ser erradicados por las reformas gregorianas (Ratcliffe 347)139

Las letras espantildeolas ya se haciacutean eco de estos lances amorosos entre representantes de la Iglesia y ciertas damas del lugar desde los tiempos del poeta riojano Gonzalo de Berceo En su obra maacutes conocida Los milagros de Nuestra Sentildeora Berceo describe con un realismo ingenuo y sencillo relatos de humor y de humanismo sobre aquellos hombres de carne y hueso que eran perdonados por la intercesioacuten de la Virgen Mariacutea Juan Ruiz por su lado haraacute de su Libro de buen amor la obra maacutes representativa en este sentido Seriacutea prolijo recordar la actuacioacuten de la Iglesia durante diversos periacuteodos de la Edad Media no soacutelo en Espantildea sino en toda Europa En la Espantildea musulmana del siglo XII concretamente en Sevilla el comportamiento de los representantes de la iglesia cristia-na (mozaacuterabe) en territorio islaacutemico es duramente criticado por el sevillano Ibn Abdun Este precioso documento muestra el estricto control y falta de confianza que existiacutea sobre la mujer prohibieacutendolas que entrasen en las laquoabominablesraquo iglesias cristianas

porque los cleacuterigos [cristianos] son libertinos fornicadores y sodomi-tas Asimismo debe prohibirse a las mujeres francas que entren en la iglesia maacutes que en diacuteas de funcioacuten o fiesta porque alliacute comen beben y fornican con los cleacuterigos y no hay uno de ellos que no tenga dos o maacutes de estas mujeres con que acostarse Han tomado esta costumbre por haber declarado iliacutecito lo liacutecito y viceversa Convendriacutea pues mandar a los cleacuterigos que se casasen como ocurre en Oriente y que si quie-ren lo hagan (Leacutevi-Provenccedilal 150)

Pese a existir una convivencia paciacutefica durante gran parte de la Edad Media entre los tres credos monoteiacutestas de Espantildea (cristianos musulmanes y judiacuteos) esto no suponiacutea que no existiese desprecio y desconfianza entre estos grupos religiosos Dice Abdun resaltando el peligro que suponiacutea que una mujer entrase en casa de un cleacuterigo cristiano de vida ceacutelibe

No debe tolerarse que haya mujer sea vieja o no en casa de un cleacuterigo mientras eacuteste rehuacutese casarse Obliacutegueseles ademaacutes a circuncidarse co-mo les obligoacute al-Mutadid pues si a lo que dicen siguen el ejemplo de Jesuacutes (iexclDios les bendiga y salve) Jesuacutes se circuncidoacute y precisamente ellos que han abandonado esta praacutectica tienen una fiesta que celebran solemnemente el diacutea de su circuncisioacuten (Leacutevi-Provenccedilal 150-151)

139 Valdriacutea la pena ver si han cambiado mucho las cosas desde hace quinientos antildeos a esta parte o si in-cluso la iglesia moderna ha retrocedido en tolerancia en cuanto a las relaciones sexuales de los representantes de la Iglesia

158 JUAN FRANCISCO MAURA

El historiador argentino Germaacuten Arciniegas recoge un pasaje ilustrativo de lo men-cionado anteriormente pero trasladado al ambiente de la colonia diciendo que incluso en poblaciones pequentildeas como Santa Fe con poco maacutes de un convento y una ermita la fragilidad de la carne enredaba a frailes soldados y virreyes por igual laquoEl buen So-liacutes que murioacute en olor de santidad con la cabeza reclinada sobre un par de ladrillos y en saya de franciscano cruzaba en las noches el solar de su palacio para ir a besar a la Marichuelaraquo (118-19)

Arciniegas recoge tambieacuten un suceso aparecido en el diario de Lima en 1667 que no tuvo que ser extraordinario durante los primeros antildeos de la colonia laquoEl fraile carmelita mdashGrande hereje y siendo sacerdote deciacutea misa gran perro lujurioso deshonesto que relatando sus maldades dijo que en cierta ciudad habiacutea conocido carnalmente a maacutes de trescientas y sesenta mujeres y en un convento de monjas habiacutea cometido muchos sacrilegios Este lo trujeron preso de Buenos Aires por Chileraquo (119)

Las controversias de la iglesia moderna sobre las relaciones que los eclesiaacutesticos de-ben tener con el sexo femenino parece que no han encontrado todaviacutea respuesta Sigue existiendo miedo y recelo a que la mujer comparta no soacutelo poder en la jerarquiacutea de la iglesiacutea sino en la vida privada de los miembros de la institucioacuten En la Nueva Espantildea el primer obispo de Meacutexico Juan de Zumaacuterraga viendo en la mujer un ser de tentacioacuten irresistible prohibioacute terminantemente la presencia de eacutestas en su casa Ni siquiera para su limpieza y aseo El franciscano Juan de Torquemada se refiere a este comportamien-to como una de las virtudes del popular obispo

Fue este benditiacutesimo prelado muy amigo de la virtud y de virtuosos y aceacuterrimo reprehendedor de vicios y viciosos y tan enemigo de la ociosidad que no permitiriacutea que alguno de su casa estuviese ocioso fue amiciacutesimo de la limpieza por lo cual jamaacutes consintioacute que mujer alguna entrase en su casa aunque fuese necesaria al servicio de ella ni nunca consintioacute que por alguna ocasioacuten subiese mujer a lo alto y aposentos de ella antes lo teniacutea todo cerrado como un monasterio porque sabiacutea (como quien tambieacuten sabiacutea) que la ocasioacuten suele derribar los maacutes fuertes y robustos corazones (450 lib 20 cap 31)

No fueron uacutenicamente miembros de la iglesia catoacutelica los que valoraron la lucha con-tra la tentacioacuten siguiendo al pie de la letra el crudeliacutesimo refraacuten laquoentre santa y santo pared de cal y cantoraquo Se tienen algunas noticias de la vida social de los primeros tiem-pos de la colonia En estos documentos se puede observar coacutemo no distaban mucho las oacuterdenes que se dictaban en la metroacutepoli y las que se llevaban a cabo en la Nueva Espantildea La vida social tanto de damas como de algunos miembros de la iglesia de las colonias era maacutes laquorelajadaraquo de lo que las normas permitiacutean Gracias a la informacioacuten ofrecida por Manuel Romero de Terreros disponemos de los nombres de las primeras virreinas

Las esposas de los primeros cinco Virreyes Don Antonio de Mendoza Don Luis de Velasco Don Gastoacuten de Peralta Don Martiacuten Enriacutequez de Almanza y Don Lorenzo Suaacuterez de Mendoza Conde de la Coruntildea fueron respectivamente Dontildea Caterina de Vargas Dontildea Ana de Cas-tilla y Mendoza hija de Don Diego de Castilla Sentildeor de Gor y Caba-

159ESPANtildeOLAS DE ULTRAMAR EN LA HISTORIA Y EN LA LITERATURA

llerizo de Carlos V Dontildea Leonor de Vieo Dontildea Mariacutea Manrique hija del Marqueacutes de Aguilar y Dontildea Catalina de la Cerda hija del segundo Duque de Medinaceli (Romero 2)

Existen noticias concretas de la seacuteptima virreina de la Nueva Espantildea (1586) dontildea Blanca de Velasco marquesa de Villamanrique En ellas destaca lo anteriormente men-cionado sobre la falta de tolerancia existente en aquellos tiempos difiacutecilmente com-prensible si no fuera por fragmentos esporaacutedicos conservados sobre la vida colonial en la Nueva Espantildea En la siguiente Relacioacuten hecha por autores anoacutenimos sobre la visita que hizo Fray Alonso Ponce Comisario General de la Orden Seraacutefica a las provincias de la Nueva Espantildea se mencionan las eneacutergicas medidas que con los miembros de su orden en su opinioacuten de moral laquomuy relajadaraquo tomoacute este religioso Tambieacuten aparecen mencionadas sus relaciones con la Virreina

Captoacutese ademaacutes la enemistad del gobernante y de la Virreina Dontildea Blanca de Velasco hija del cuarto Conde de Nieva sentildeora seguacuten pare-ce de conducta ligera y caraacutecter maacutes que dominante laquoPor este mismo tiempo (septiembre de 1586) fueron el Virey y la Vireyna a holgarse y recrearse en la cibdad de Xochimilco Posoacute con toda su casa dentro de nuestro convento en un dormitorio deacutel y detuacutevose alliacute siete u ocho diacuteas en que los indios les hicieron grandes fiestas aunque les costaron caras porque en una dellas murieron dos o tres dellos con un tiro que se disparoacute y reventoacute y al principal indio de aquella cibdad hirieron muy malraquo (Romero 3-4)

A pesar del riacutegido control eclesiaacutestico y civil que habiacutea en la Nueva Espantildea existieron tambieacuten pareacutentesis en los que incluso miembros de la iglesia y mujeres mdashhumanos al fin y al cabomdash pudieron disfrutar de algunos momentos de regocijo y alegriacutea Con-tinuando con la cita anterior el mismo autor se queja del laquoexcesoraquo de libertad en los frailes que se suponiacutea que teniacutean que profesar una extremada pobreza y no digamos castidad En primer lugar se describen pormenorizadamente la abundancia en el tipo y cantidad de comida de toda clase dulces y vino que se consumieron con largueza y generosidad durante aquellas fiestas Pero lo que maacutes indigna al autor (o autores) fue que llegasen a entrar mujeres en el convento

y aunque todo esto es malo delante de Dios y delante de los hom-bres lo que maacutes mal parecioacute y de que todo el mundo tuvo que mur-murar fueacute la demasiada libertad rotura y disolucioacuten que hubo en en-trar y estar muy de propoacutesito mujeres no soacutelo la Vireyna y las suyas sino otras muchas dentro del dicho convento y andar por las celdas como si fuese cosa profana y como si no hubiera breve apostoacutelico que soacute graves penas y censuras prohibe estas entradas y como si a los frai-les no los comprendiera el dicho breve por admitirlas y no estuviera asiacute declarado y mandado por nuestros estatutos generales de Toledo (Romero 4-5)

La preocupacioacuten por las laquotentaciones de la carneraquo fuera del matrimonio siempre es-tuvo en la mente de los religiosos espantildeoles asiacute como de otras nacionalidades y reli-

160 JUAN FRANCISCO MAURA

giones que intentaban vanamente erradicar algo tan intriacutenseco al ser humano como a cualquier otra especie animal Esta preocupacioacuten se acentuoacute mucho maacutes en el Nuevo Mundo donde muchas sociedades tribales no veiacutean a la mujer como parte integrante de su propiedad privada La razoacuten es obviamente socioloacutegica y ha existido desde el principio de los tiempos en las civilizaciones maacutes primitivas laquoNo desearaacutes a la mujer del proacutejimoraquo El quebrantar este precepto equivaldriacutea a desestabilizar desde su base a la sociedad judeo-cristiana fundamentada en la familia Las penas aplicadas en estas transgresiones seraacuten lo suficientemente severas como para marginar socialmente mdashen el mejor de los casosmdash a aquellos que las pongan en praacutectica Siendo la mujer la encar-gada por la naturaleza de trasmitir la descendencia de la especie su libertad sexual se veraacute limitada por el peligro de quedar embarazada cada vez que ignore tal elemental precepto140

Primeras escritoras del Nuevo Mundo

Contra cuerdos y contra locos estaacute obligado cualquier caballero andante a volver por la honra de las mujeres cualesquiera que sean Cuanto maacutes por las reinas de tan alta guisa y pro como fue la reina Madaacutesima a quien yo tengo particular aficioacuten por sus buenas partes porque fuera de haber sido fermosa ademaacutes fue muy prudente y muy sufrida en sus calamidades que las tuvo muchas (Cervantes Don Quijote)

Fueron varias las escritoras que durante los siglos XVI y XVII tuvieron una relacioacuten di-recta o indirecta con el Nuevo Mundo Muchas de ellas eligieron la vida monaacutestica mdashen algunos casos como refugio huyendo de sus maridosmdash uacutenica salida en una estructura social en donde no eran muchas las opciones especialmente en una eacutepoca donde el fac-tor religioso pesaba casi tanto como el econoacutemico pero sobre todo para dedicarse a una vida espiritual difiacutecilmente alcanzable en otras circunstancias Mariloacute Vigil apunta que las monjas que lo eran por su propia voluntad ademaacutes de tener inquietudes religiosas tambieacuten las teniacutean intelectuales como es el caso de la escritora miacutestica espantildeola Santa Teresa de Jesuacutes (1515-1582) que ademaacutes de tener una de las vidas maacutes interesantes que se conozcan supo sacar tiempo para escribir las maacutes bellas manifestaciones de la poesiacutea liacuterica y sobre todo de la prosa castellana (Vigil 237-38) Cada una de estas mujeres de-dicadas a la vida literaria y espiritual de su tiempo se merece muchiacutesimo maacutes espacio del que se les pueda ofrecer en estas pocas liacuteneas No obstante con estas pasajeras men-

140 Aunque afortunadamente las cosas han cambiado para la mujer no se debe dejar de mencionar la can-tidad de abusos sexuales de la que es viacutectima en la sociedad moderna

161ESPANtildeOLAS DE ULTRAMAR EN LA HISTORIA Y EN LA LITERATURA

ciones se espera al menos incluirlas y poder despertar el suficiente intereacutes para que sus vidas y sus obras no sigan sumergidas en las simas del olvido Para que estas mujeres de la iglesia pudiesen satisfacer su curiosidad cognoscitiva era necesario romper todas aquellas barreras que supusiesen un estorbo o una restriccioacuten a la hora de investigar consultar o hablar con cualquier persona religiosa de cualquier orden o secular ya fue-se obispo o cleacuterigo Las posiciones intelectuales entre las diferentes oacuterdenes religiosas fueron muy dispares como bien es sabido No eran iguales los planteamientos teoloacute-gicos de los dominicos que los de los franciscanos o los de los carmelitas que los de los agustinos o jesuitas Era necesario por lo tanto tener acceso a estas fuentes de informa-cioacuten para poder constrastar las diferencias y hacer valoraciones propias (Vigil 237-38) El escritor espantildeol Caro Baroja destaca el caraacutecter enciclopeacutedico del catolicismo donde se han integrado corrientes y posturas muy dispares que a traveacutes del diaacutelogo daban cierto espacio al creyente con maacutes curiosidad intelectual para que este pudiese compa-rar y valorar las diferentes opciones que se le ofreciacutean (Vigil 237-38)

Varias de estas mujeres intelectuales fueron hijas de conquistadores que aunque na-cidas en suelo americano seguiacutean expresaacutendose en la lengua de sus padres con no me-nos fuerza que sus contemporaacuteneas peninsulares Es cierto que existieron numerosas escritoras en el Nuevo Mundo durante el siglo XVIII algunas dedicadas incluso al estudio de las matemaacuteticas como la mexicana Dontildea Francisca Gonzaga y Castillo Pero para limitar el presente trabajo a los siglos XVI y XVII uacutenicamente se incluiraacuten ejemplos de estos dos siglos

La peruana Josefa de Alarcoacuten publicoacute en 1648 unas liras dedicadas a las Exequias del Priacutencipe Baltasar Carlos

Cifro en capilla breveEl tribunal de la Magestad maacutes graveEn fe de lo que debeA Carlos que en dos mundos no cabe141

El caso de Sor Jeroacutenima de la Asuncioacuten es muy interesante una mujer que tuvo la oportunidad de viajar a Meacutexico y posteriormente a las Filipinas para cumplir con las mi-siones que le habiacutean sido encomendadas por su orden Nacida en Toledo en 1555 en el seno de una noble y acaudalada familia estuvo destinada a recorrer el mundo ofrecien-do sus servicios a todos los necesitados distinguieacutendose por su ardiente caridad laquovien-do que los galeotes eran tratados con dureza excesiva sobre todo cuando los llevaban de un pueblo a otro procuroacute aliviar las penas de aquellos desgraciados y lo consiguioacute en parteraquo (Serrano y Sanz 268 65) Hija del licenciado e ilustre jurista Pedro Garciacutea Yaacute-ntildeez y de dontildea Catalina de la Fuente ingresoacute contra su voluntad en el monasterio de las Clarisas de Santa Isabel de los Reyes (Toledo) el 5 de agosto de 1570 (Trevintildeo 46) hay que decir que eacutesta no seraacute la uacutenica voluntad contra la que tuvo que luchar

Sor Jeroacutenima se embarcoacute para Meacutexico y de alliacute partioacute hacia Manila junto con siete compantildeeras en el famoso laquoGaleoacuten de Manilaraquo que saliacutea anualmente del puerto mexi-cano de Acapulco Su viaje a las Filipinas duroacute un antildeo y tres meses desde su salida de Espantildea tiempo en el que demostroacute un gran valor y determinacioacuten por el soacutelo hecho de

141 Manuel Serrano y Sanz Apuntes para una biblioteca de escritoras espantildeolas desde el antildeo 1401 al 1833 vols 268 269 270 271 Biblioteca de Autores Espantildeoles (Madrid Atlas 1975) 268 19

162 JUAN FRANCISCO MAURA

embarcarse en tan precarias naves Fue la primera misionera de Oceaniacutea muriendo en Manila en 1621 Alliacute fundoacute el monasterio de Santa Clara que perviviriacutea hasta ser bom-bardeado en la Segunda Guerra Mundial (Trevintildeo 47) Escribioacute su Vida donde trata de la fundacioacuten del convento y de todas las tribulaciones mdashllegoacute a ser excomulgadamdash y satisfacciones que una vida dedicada a una causa justa proporciona Tambieacuten escribioacute una obra de caraacutecter filosoacutefico-teoloacutegico titulada Carta de marear en el mar del mundo nombre alegoacuterico que da cuenta de la enorme distancia recorrida a traveacutes del laquomar del espiacuterituraquo por sor Jeroacutenima He aquiacute algunos de sus versos de caraacutecter religioso

Vuestra soy para vos naciacuteiquestQueacute mandaacuteis hacer de miacute Inaccesible grandezaEterna Sabiduriacuteay bondad del alma miacuteaDios un ser poder y Altezamirad la suma pobrezade eacutesta que se ofrece aquiacuteiquestQueacute mandaacuteis hacer de miacute (Serrano y Sanz 268 66)

Ya en Meacutexico tenemos otro ejemplo de una mujer dedicada por completo a Dios y al estudio y composicioacuten de obras de caraacutecter teoloacutegico Dontildea Ana Mariacutea del Costa-do de Cristo nacida en la ciudad de Tlaxcala hacia el antildeo 1650 Tomoacute la orden de San Francisco para consagrarse a las labores de su orden y a la escritura Se dice que con los escritos de Dontildea Ana Mariacutea se podriacutean formar veinte tomos (Serrano y Sanz 268 282) Estas son algunas de sus obras Vida y muerte de Jesucristo Nuestro Sentildeor Vida del Seraacutefico Padre San Francisco de Asiacutes Vida de la iacutenclita Virgen Santa Clara Vida del sutiliacutesimo doctor Juan Duns Escoto

Pero no todas las monjas tuvieron vidas tan dedicadas al estudio y la oracioacuten Loacutegica-mente entre un nuacutemero tan grande de mujeres existioacute de todo y seriacutea un error pensar que todos los conventos femeninos estaban integrados por laquocaacutendidas palomasraquo Una monja en el siglo XVI y XVII teniacutea mucha maacutes fuerza que una mujer ordinaria ya que actuaban en grupo y la entrada a los recintos donde viviacutean estaba permitida solo a mu-jeres Esta situacioacuten las haciacutea mucho maacutes fuertes a todos los niveles que una mujer sola protegida uacutenicamente por su familia laquoLas monjas durante los siglos XVI y XVII lucharon por eludir la clausura y por zafarse del control que los frailes de las secciones masculi-nas de sus congregaciones ejerciacutean sobre ellasraquo (Vigil 230) Soacutelo un antildeo maacutes tarde que dontildea Ana Mariacutea del Costado de Cristo en 1651 y a 12 leguas de Meacutexico nacioacute la sin par Sor Juana Ineacutes de la Cruz hija de don Pedro Manuel de Asbaje natural de Vergara (Vizcaya) y de Dontildea Isabel Ramiacuterez de Santillana hija de espantildeoles (Serrano y Sanz 268 289) Por ser sin lugar a dudas la poeta maacutes importante de su tiempo y probable-mente la maacutes conocida del mundo hispano no profundizaremos en ella Su obra es un canto a la inteligencia y el exponente maacutes destacado de la literatura barroca americana tanto en prosa como en verso Destacareacute simplemente que Sor Juana Ineacutes pese a vivir en un sociedad donde no eran excesivas las libertades concedidas a las mujeres tuvo el caraacutecter y la determinacioacuten de dejarnos las maacutes bellas poesiacuteas amorosas que si bien estuvieron enmarcadas en un ambiente religioso como era de esperar por su condicioacuten

163ESPANtildeOLAS DE ULTRAMAR EN LA HISTORIA Y EN LA LITERATURA

pudieron transcender como unas de las maacutes bellas manifestaciones literarias que hoy en diacutea se conservan Fue su agudeza mental sensibilidad y cultura tal que no fueron suficientes los soacutelidos muros del convento para contener el genio de tan extraordinaria mujer Recordemos sus conocidiacutesimos versos en defensa de las mujeres

Hombres necios que acusaacuteisa la mujer sin razoacutensin ver que sois la ocasioacutende lo mismo que culpaacuteis142

Las metaacuteforas y la delicadeza que emplea en rebatir a su obispo en su laquoRespuesta a sor Filotea de la Cruzraquo no son solamente el epiacutetome del feminismo de su tiempo sino una de las maacutes brillantes manifestaciones del barroco hispano Poesiacutea teatro ensayo y un conocimiento extraordinario de las ciencias claacutesicas de su tiempo hacen de esta mujer un ejemplo extraordinario de las letras universales Ya son cientos los artiacuteculos y libros que se han escrito sobre Sor Juana y no dejan de aparecer tesis doctorales sobre los maacutes diversos temas conectados con la citada autora143 Como nos dice Stephanie Merrim en su documentada obra Early Modern Womenrsquos Writing and Sor Juana Ineacutes de la Cruz

She wrote and published on secular themes as atypical for a nun as human love Her remarkably extensive writings essayed and reenacted most of the (male) poetic dramatic theological and even philosophi-cal discourses of her times in the metropolis making her works a com-pendium of baroque culture in its diversity and syncretism Sor Juana self-creation as a learned women effectively toppled many of the walls in which she was materially enclosed and positioned her within the dynamic world of early modern European culture (xii)

No se debe dejar de mencionar a otras escritoras novohispanas de la eacutepoca que aun-que no fueron tan proliacuteficas y relevantes como Juana Ineacutes de la Cruz dejaron testimo-nio de algunos acontecimientos que tienen intereacutes socioloacutegico o testimonial Este es el caso de Dontildea Mariacutea Estrada Medinilla de igual nombre y apellido que la mujer que acompantildeoacute a las tropas de Corteacutes en su primera entrada a Meacutexico Natural de Meacutexico publicoacute toda su obra a mediados del siglo XVII concentraacutendose principalmente en la lle-gada del Marqueacutes de Villena virrey y capitaacuten general de la Nueva Espantildea a la ciudad de Meacutexico en el antildeo 1640 Escrita en octavas reales la obra trata de las fiestas de toros y cantildeas con que se obsequioacute al citado virrey Fue impresa en Meacutexico en 1641 (Serrano y Sanz 269 402)

Mucho maacutes importante para el presente libro es Dontildea Isabel de Guevara que escribioacute en 1556 la carta en que se expone la ayuda que ofrecieron las mujeres en el descubri-miento y conquista del Riacuteo de la Plata No cabe la menor duda de que esta carta es uno

142 Para una mejor comprensioacuten del caraacutecter de esta excepcional mujer veacutease entre los numeros trabajos publicados Fredo Arias de la Canal Intento de psicoanaacutelisis de Juana Ineacutes y otros ensayos sorjuanistas (Meacutexico Frente de Afirmacioacuten Hispanista 1972) 47

143 Veacuteanse entre otros trabajos Octavio Paz Sor Juana Ineacutes de la Cruz o las trampas de la fe Georgina Sabat de Rivers En busca de Sor Juana Margo Glantz Sor Juana la comparacioacuten y la hipeacuterbole Gerard C Flynn Sor Juana Ineacutes de la Cruz Stephanie Merrim Feminist perspectives on Sor Juana Ineacutes de la Cruz Pamela Kirk Sor Juana Ineacutes de la Cruz religion art and feminism

164 JUAN FRANCISCO MAURA

de los documentos maacutes importantes con que contamos en relacioacuten a la aportacioacuten fe-menina en el proceso de la conquista de Ameacuterica Su importancia viene dada por varios factores Primero es uno de los primeros testimonios mdashsi no el primeromdash en donde se expone abiertamente la indispensable colaboracioacuten de las mujeres en el descubrimien-to y conquista de tierras en el Nuevo Mundo laquoQue si no fuera por ellas todos fueran acabadosraquo En segundo lugar la informacioacuten vertida en estas liacuteneas presenta en parte la manera de pensar de una mujer espantildeola en tales circunstancias Extraordinario tes-timonio de primera mano que nos da una idea de lo que significoacute en muchos casos el valor y entrega constantes de muchas de estas mujeres que auacuten a riesgo de perder sus vidas no dudaron en luchar al lado de los hombres por una causa que consideraban laquocomuacutenraquo

La relevancia histoacuterica de dicha carta hace que merezca ser transcrita en su totali-dad

Carta de dontildea Isabel de Guevara a la princesa gobernadora dontildea Juana exponiendo los trabajos hechos en el descubrimiento y conquista del Riacuteo de la Plata por las mujeres para ayudar a los hombres y pidiendo repartimiento

para su marido Asuncioacuten 2 de julio de 1556

Muy alta y muy poderosa sentildeora

A esta provincia del Riacuteo de la Plata con el primer gobernador de ella don Pedro de Mendoza hemos venido ciertas mujeres entre las cuales ha querido mi ventura que fuese yo la una y como la armada llegase al puerto de Buenos Aires con mil quinientos hombres y les faltase el bastimento fue tamantildea el hambre que a cabo de tres meses murie-ran los mil esta hambre fue tamantildea que ni la de Jerusalem se le puede igualar ni con otra ninguna se puede comparar Vinieron los hombres en tanta flaqueza que todos los trabajos cargaban de las pobres mu-jeres asiacute en lavarles las ropas como en curarles hacerles de comer lo poco que teniacutean limpiarlos hacer centinela rondar los fuegos armar las ballestas cuando algunas veces los indios les veniacutean a dar guerra hasta cometer a poner fuego en los versos y a levantar los soldados los que estaban para ello dar arma por el campo a voces sargentean-do y poniendo en orden los soldados porque en este tiempo como las mujeres nos sustentamos con poca comida no habiacuteamos caiacutedo en tanta flaqueza como los hombres Bien creeraacute V A que fue tanta la so-licitud que tuvieron que si no fuera por ellas todos fueran acabados y si no fuera por la honra de los hombres muchas maacutes cosas escribiera con verdad y los diera a ellos por testigos Esta relacioacuten bien creo que la escribiraacuten a V A maacutes largamente y por eso cesareacute Pasada esta tan peligrosa turbunada determinaron subir el riacuteo arriba asiacute flacos como estaban y en entrada de invierno en dos bergantines los pocos que quedaron vivos y las fatigadas mujeres los curaban y los miraban y les guisaban la comida trayendo la lentildea a cuestas fuera del naviacuteo y animaacutendolos con palabras varoniles que no se dejasen morir que presto dariacutean en tierra de comida metieacutendolos a cuestas en los

165ESPANtildeOLAS DE ULTRAMAR EN LA HISTORIA Y EN LA LITERATURA

bergantines con tanto amor como si fueran sus propios hijos Y como llegamos a una generacioacuten de indios que se llaman tinbues sentildeores de mucho pescado de nuevo los serviacuteamos en buscarles diversos modos de guisados porque no les diese en rostro el pescado a causa de que lo comiacutean sin pan y estaban muy flacos Despueacutes determinaron subir el Paranaacute arriba en demanda de bastimento en el cual viaje pasaron tanto trabajo las desdichadas mujeres milagrosamente quiso Dios que viviesen por ver que en ellas estaba la vida de ellos porque todos los servicios del naviacuteo los tomaban ellas tan a pechos que se teniacutea por afrentada la que menos haciacutea que otra sirviendo de marear la vela y gobernar el naviacuteo y sondar de proa y tomar el remo al soldado que no podiacutea bogar y escotar144 el naviacuteo y poniendo por delante a los soldados que no se desanimasen que para los hombres eran los trabajos verdad es que a estas cosas ellas no eran apremiadas ni las haciacutean de obliga-cioacuten ni las obligaba si solamente la caridad Asiacute llegaron a esta ciudad de la Asuncioacuten que aunque ahora estaacute muy feacutertil de bastimentos en-tonces estaba de ellos muy necesitada que fue necesario que las muje-res volviesen de nuevo a sus trabajos haciendo rosas con sus propias manos rosando y carpiendo y sembrando y recogiendo el bastimento sin ayuda de nadie hasta tanto que los soldados guarecieron de sus fla-quezas y comenzaron a sentildeorear la tierra y adquirir indios e indias de su servicio hasta ponerse en el estado en que ahora estaacute la tierra He querido escribir y traer a la memoria de V A para hacerle saber la ingratitud que conmigo se ha usado en esta tierra porque al presente se repartioacute por la mayor parte de los que hay en ella asiacute de los anti-guos como de los modernos sin que de miacute y de mis trabajos se tuviese ninguna memoria y me dejaron de fuera sin me dar indio ni ninguacuten geacutenero de servicio Mucho me quisiera hallar libre para me ir a presen-tar delante de VA con los servicios que a SM he hecho y los agravios que ahora se me hacen mas no estaacute en mi mano porque estoy casada con un caballero de Sevilla que se llama Pedro de Esquivel que por servir a SM ha sido causa que mis trabajos quedasen tan olvidados y se me renovasen de nuevo porque tres veces le saqueacute el cuchillo de la garganta como allaacute VA sabraacute A que suplico mande me sea dado mi repartimiento perpetuo y en gratificacioacuten de mis servicios [en el origi-nal del AHN Diversos doc 141 dice ademaacutes mande que sea proveydo mi marido de alguacuten cargo conforme a la calidad de su persona pues el de su parte por sus servicios lo merece] lo merece Nuestro sentildeor acre-ciente su Real vida y estado por muy largos antildeos De esta ciudad de la Asuncioacuten y de julio 2 1556 antildeosServidora de V A que sus Reales manos besa

Dontildea Isabel Guevara

144 Sacar agua de un riacuteo acequia o presa

166 JUAN FRANCISCO MAURA

Sobremdash A la muy alta y muy poderosa sentildeora Princesa dontildea Joana Gobernadora de los reinos de Espantildea etc ndash En su Consejo de Indias (Isabel de Guevara 619-21)

Iroacutenicamente la carta teniacutea que llegar a manos de la desdichada heredera del trono de Castilla e hija de los Reyes Catoacutelicos Juana laquola Locaraquo que habiacutea muerto el antildeo an-terior Son profeacuteticas las palabras de esta mujer no soacutelo porque sus hechos personales quedasen en el olvido sino porque incluso se ha borrado la historia de las mujeres en el Nuevo Mundo negando su presencia Por lo menos Isabel Guevara tuvo acceso a una pluma iquestCuaacutentas seriacutean las que ni siquiera sabriacutean escribir

Otra contemporaacutenea fue dontildea Leonor de Iciz que vivioacute durante la segunda mitad del siglo XVI Interesa sobre todo por los sonetos que escribioacute en elogio de Ercilla soldado que participoacute en la conquista de Chile y que se inmortalizoacute con su obra La Araucana (Serrano y Sanz 269 534) Lo mismo hizo Dontildea Bernarda Lintildeaacuten en 1610 autora de otro soneto en memoria del capitaacuten Gaspar Peacuterez de Villagraacute que participoacute en la conquista de Nuevo Meacutexico (Serrano y Sanz 270 14) Los escritos de estas mujeres tratan de de dos de las eacutepicas maacutes dramaacuteticas de la conquista

En el Peruacute y en pleno siglo XVII aparece otra fundadora de conventos Sor Bernardina de Jesuacutes que ademaacutes fue comparada con Santa Teresa por la semejanza de sus laquocartasraquo con las de la santa de Avila Fue fundadora del convento de Tacunga en Quito maacutes tarde destruiacutedo por un terremoto Dice Serrano y Sanz con respecto a su biografiacutea un tanto legendaria que fue carmelita descalza de Lima y hermana de Dontildea Mariacutea Benavides y Esquivel abuela de D Pedro de Peralta Barnuevo (Serrano y Sanz 269 553) Dicen que esta santa se alimentoacute durante treinta antildeos con laquochochos y caacutescaras de naranja hecho tan raro como increiacuteble Cuando fallecioacute reparaban las monjas en ponerle una vara de azucenas porque habiacutea sido casada y aquellas flores aparecieron milagrosamente sobre el cadaacuteverraquo (Serrano y Sanz 269 553)

Otra limentildea del primer cuarto del siglo XVII con reputacioacuten de santa fue Dontildea Luisa Melgarejo En este caso no se trata de una religiosa de oficio sino de la mujer del doctor Juan de Soto La uacutenica diferencia es que dontildea Luisa al parecer teniacutea laquovisiones y reve-lacionesraquo lo que debioacute poner nervioso a maacutes de un miembro del tribunal del laquoSanto Oficioraquo que consideraron sus escritos laquoculpadosraquo De su papel de laquosantaraquo pasa por lo tanto al de laquoposesaraquo o laquoendemoniadaraquo El inquisidor de Lima Gaitaacuten escribioacute un infor-me donde a traveacutes de la opinioacuten puacuteblica y de otras averiguaciones se deciacutea que dontildea Luisa Melgarejo laquomujer santaraquo sabiacutea cuando las almas de los difuntos saliacutean del Purga-torio El diacutea 14 de noviembre de 1623 se decidioacute tomar posesioacuten de todos los cuadernos en los que habiacutea escrito las experiencias de todos sus laquoarrobos suspensiones extasis y revelacionesraquo Estos cuadernos una vez recogidos presentaron toda una serie de al-teraciones borrones adiciones enmiendas incluso diferente letra por lo que despueacutes de haber sido examinados resultaron culpables145 Excelente imaginacioacuten debioacute tener dontildea Luisa Melgarejo la suficiente al parecer para convencer a algunos miembros de la iglesia de que en sus escritos laquohabiacutea algoraquo que mereciacutea la pena Estas cosas ocurriacutean en Lima uno de los centros culturales maacutes importantes de la vida social y poliacutetica en la Ameacuterica espantildeola Lima a comienzos del siglo XVII seguacuten el empadronamiento llevado

145 Serrano y Sanz 270 47 Veacutease J T Medina Historia del tribunal del Santo Oficio de la Inquisicioacuten de Lima (1569-1820) (Santiago Imprenta Gutemberg 1887) Tomo II 34-41

167ESPANtildeOLAS DE ULTRAMAR EN LA HISTORIA Y EN LA LITERATURA

a cabo en 1614 por el marqueacutes de Montesclaros era una ciudad de 25000 habitantes de los que 11000 eran espantildeoles El nuacutemero de religiosos y religiosas llegaba a 1720 (Pittaluga 77)

Se sabe que en la Isla de Santo Domingo durante el siglo XVI nacioacute o al menos resi-dioacute una poeta de ceacutelebre apellido en los aconteceres del Nuevo Mundo Dontildea Elvira de Mendoza de la que se conserva un manuscrito en la Real Academia de la Historia laquoCantares miacuteos que estaacuteis rebeladosraquo Eugenio de Salazar hace un elogio de ella como poeta en un Soneto a la ilustre Poeta y Sentildeora Dontildea Elvira de Mendoza moradora en la ciudad de Santo Domingo (Serrano y Sanz 270 53)

Nacida en Burgos sobre el antildeo 1590 dontildea Luisa de Padilla merece un lugar aparte dentro del grupo de mujeres escritoras de su eacutepoca Por su estilo faacutecil y castizo su no-vedad de pensamientos y su rica erudicioacuten recibioacute el siguiente comentario de Manuel Serrano y Sanz laquoPocas figuras hay en nuestra historia literaria femenil que puedan compararse a esta eminente prosista acaso la maacutes notable de cuantas florecieron en Es-pantildea durante el siglo XVIIraquo (Serrano y Sanz 270 95-96) Este comentario y comparacioacuten deberiacutea ampliarse para que tambieacuten incluyese a laquola historia literaria varonilraquo

Dontildea Luisa fue defensora de la labor que la Inquisicioacuten estaba realizando en la laquolim-piezaraquo de mujeres laquosoldados del demonioraquo que existieron en algunas provincias espa-ntildeolas en aquel tiempo Muchas de las mujeres que combinaban la magia con los po-deres curativos fueron condenadas no solamente por hombres de la Inquisicioacuten sino tambieacuten por mujeres de todas las clases sociales como es el caso de Luisa de Padilla condesa de Aranda En su obra Elogios de la verdad e invectiva contra la mentira preveniacutea contra aquellos que practicaban artes en contra de la religioacuten cristiana La magiacutea negra seguacuten Padilla era la causante de que muriesen casi tantas personas como otras causas naturales habieacutendose descubierto hasta seis mil brujas en Vizcaya y Guipuzcua con-fesando una mujer de un pueblo pequentildeo haber matado con su laquomagiaraquo a ochocientas personas (Perry 31) Eran estos laquomales de ojoraquo y maldiciones seguacuten la autora las causas de que se secasen los pechos de las madres lactantes que se separasen las parejas casa-das y que abortasen las embarazadas (Perry 31)

Si se tiene en cuenta que dontildea Luisa estuvo emparentada con la maacutes rancia aristocra-cia de su tiempo o lo que es lo mismo con algunos de aquellos que en cierta manera dirigiacutean los destinos de Espantildea en aquella eacutepoca (Duques de Lerma Duque de Uceda Marqueacutes de Cueacutellar Conde de Santa Gadea Marqueacutes de Belmonte por citar algunos) se comprenderaacute mejor su identificacioacuten con una institucioacuten que en teoriacutea velaba por la salvaguarda de los valores laquoeternosraquo de una Espantildea destinada a ser la campeona del ca-tolicismo durante los siglos XVI y XVII El padre de dontildea Luisa fue don Martiacuten de Padilla y Manrique extraordinario militar que proboacute su valor contra enemigos moriscos ingle-ses holandeses piratas berberiscos y el renegado genoveacutes Muley Faxad Fue veterano de la batalla de Lepanto donde apresoacute a cuatro galeras y acompantildeoacute con su escuadra a la reina Dontildea Margarita de Austria cuando vino de Geacutenova en 1598 laquoHabiacutea obtenido a 24 de julio de 1587 el tiacutetulo de Conde de Santa Gadea y en 1596 el de Capitaacuten General de la Armada del mar Oceacuteanoraquo (Serrano y Sanz 27095-96)

Por otra parte tambieacuten se sabe que dontildea Luisa participoacute directamente y desde tem-prana edad en la praacutectica de algunas actividades intelectuales como la historia y la arqueologiacutea a la vez que dedicaba su tiempo a virtudes cristianas como la caridad y el socorro de los necesitados (Serrano y Sanz 270 97) Resulta mucho maacutes faacutecil compren-

168 JUAN FRANCISCO MAURA

der la postura ideoloacutegica de esta gran mujer si tienen en cuenta ademaacutes de los factores antes mencionados otros tantos de caraacutecter biograacutefico concernientes a su educacioacuten y matrimonio

Otra escritora fue la mexicana dontildea Mariacutea Casilda Pozo natural de Temestla (Meacutexi-co) Nacida en el mes de abril de 1682 dejoacute escrita su biografiacutea en 16 cuadernos el ma-nuscrito original se encuentra en la biblioteca del colegio de San Gregorio de Meacutexico Fue su confesor el jesuiacuteta Domingo Quiroga que fue quieacuten la incitoacute a escribir su obra (Serrano y Sanz 270 137) Sor Juana de San Antonio aparece a principios del siglo XVII formando parte de un grupo de religiosas espantildeolas que fueron a Manila por la ruta de Meacutexico Ademaacutes de distinguirse por sus cualidades personales su obra interesa por ofrecer informacioacuten testimonial y costumbrista acerca de la forma de vestir de chinos y japoneses (Serrano y Sanz 270 225)

Otra monja esta vez ecuatoriana fue Gertrudis de San Ildefonso Nacida en 1652 profesoacute su vocacioacuten en el convento de Santa Cruz de Quito dejando escrita su vida por mandato de su confesor el padre Martiacuten de la Cruz el cual hizo una biografiacutea laquoen tres gruesos voluacutemenesraquo Gertrudis de San Ildefonso murioacute en 1709 (Serrano y Sanz 270 300) en olor de santidad

Sor Mariacutea Ana Agueda de San Ignacio nacioacute el 3 de marzo de 1695 en la dioacutecesis de la puebla de los Angeles en un rancho del lugar de Santiago Tecaliacute (Serrano y Sanz 270300) Esta monja mexicana escribioacute varias obras durante su vida conventual a lo largo de la cual desempentildeoacute el cargo de priora por muchos antildeos Entre sus obras todas de caraacutecter piacuteo y de laquoamor divinoraquo escribioacute un curioso y laquocopiosoraquo tratado de la Leche virginal de la Soberana Madre de Dios El padre Fr Juan de Villa Saacutenchez hace el siguiente comentario al respecto laquoen que hablando primero en sentido natural de los beneficios que debemos a Nuestra Sentildeora pasa a tratar en sentido miacutestico y alegoacuterico enten-diendo en la leche la doctrinaraquo (Serrano y Sanz 270301) Mexicana fue tambieacuten Sor Petronila de San Joseacute que ejercioacute como abadesa del Real monasterio de Jesuacutes Mariacutea de la ciudad de Meacutexico Escribioacute Vidas de varias religiosas ejemplares obra que tiene su im-portancia ya que al parecer laquoDe esta obra se sirvioacute D Carlos de Siguumlenza y Goacutengora para escribir su Parayso Occidental (Meacutexico 1684) seguacuten eacutel mismo declara en el proacutelogo diciendo lsquoa quien si hay algo bueno en esta historia se le debe todorsquoraquo (Serrano y Sanz 270 354) Menos conocida fue su compatriota Sor Luisa de Santa Catalina natural de Xacona laquopueblo situado en las inmediaciones de Zamora (Meacutexico)raquo siendo bautizada en 1682 Escribioacute Cartas espirituales a su confesor el P Juan Loacutepez de Aguado (Serrano y Sanz 270 361-62)146

Todos estos escritos la mayoriacutea de ellos ignorados por el gran puacuteblico tienen la im-portancia de darnos una perspectiva diferente En otras palabras ensentildearnos la maacutes refinada sensibilidad de muchas mujeres que permanecieron y en su mayoriacutea siguen permaneciendo a laquooscurasraquo de una eacutepoca tan rica de la literatura espantildeola como fue el Siglo de Oro Este siglo fue tambieacuten en su dimensioacuten literaria y artiacutestica patrimonio de la mujer

146 Para profundizar en muchas de estas escritoras hispano-americanas la consulta de la Biblioteca Hispano-Americana de Beristain de Souza resulta de capital importancia

169ESPANtildeOLAS DE ULTRAMAR EN LA HISTORIA Y EN LA LITERATURA

Sor Nada ardores divinos de una monja adolescente escritos ineacutedi-tos de una recieacuten profesa del siglo XVI147

iexclQueacute encantadores son tus amores hermana miacutea espo-sa iexclQueacute deliciosos son tus amores maacutes que el vino Y el aroma de tus perfumes es mejor que el de los baacutelsamos Miel virgen destilan tus labios esposa miel y leche hay en tu lengua y el perfume de tus vestidos es como aroma de incienso (Cantar de los Cantares 4 10-11)

Sor Nada llamada asiacute por humildad seguacuten dice el Indice de manuscritos de la Biblio-teca Nacional de Madrid es uno de los ejemplos maacutes desconocidos e interesantes que tenemos de la poesiacutea y prosa amoroso-religiosa del siglo XVII Hasta la fecha nunca se habiacutea publicado su obra e incluso hasta el antildeo 1995 para mi sorpresa no habiacutea copias microfilmadas de sus manuscritos en la Biblioteca Nacional Serrano y Sanz en su libro Apuntes para una Biblioteca de Escritoras Espantildeolas hace una escueta y pasajera mencioacuten de esta mujer y de su obra (68-69) siendo eso todo lo que hasta ahora se sabiacutea de ella Sus escritos consisten en los siguientes manuscritos

1 laquoEn queacute consiste un verdadero amor de Diosraquo 9 hojas uacutetiles en 4ordm letra del siglo XVII Biblioteca Nacional de Espantildea Manuscrito 1295926

2 laquoPintura del Propio Amorraquo laquoPintura del propio Amorraquo 10 hojas uacutetiles en 4ordm letra del siglo XVII Biblioteca Nacional de Espantildea Manuscrito 1295927

3 laquoEsplicacioacuten sobre en queacute consiste la paz del Almaraquo laquoQuartillas aacute un Alma que padece soledad interiorraquo 7 hojas uacutetiles en 4ordm letra del siglo XVII Biblioteca Nacio-nal de Espantildea Manuscrito 1295828

En cuanto a su persona soacutelo se nos dice que laquose encubrioacute con este seudoacutenimo laquoSor Nadaraquo Esta monja desconocida de origen hispanoamericano posee toda la frescura e ingenuidad de una joven apasionada metida por vocacioacuten u obligacioacuten a ejercer la profesioacuten maacutes comuacuten para mujeres de cierta clase social de su tiempo En sus liacuteneas podemos encontrar un misticismo simple incluso en algunos momentos infantil pero a su vez lleno de una fuerza y sensualidad interior poco comuacuten en escritos de este geacute-nero que desborda los liacutemites del laquoamor divinoraquo a traveacutes de los diaacutelogos entre el Alma y el Esposo Sor Nada consigue proyectar su amor a Dios maacutes allaacute de una experiencia romaacutentica Su experiencia es sincera y genuinamente miacutestica trascendiendo la imita-cioacuten o la propia creacioacuten poeacutetica ficcionalizada (Hatzfeld 30) Algunos pasajes son de un

147 Veacutease mi artiacuteculo Sor Nada ardores divinos de una monja adolescente escritos ineacuteditos de una monja profesa del siglo XVIIraquo Espeacuteculo Revista de estudios literarios 26 (2004) 1-10 Universidad Complutense de Madrid http wwwucmesinfoespeculonumero26sornadahtml

170 JUAN FRANCISCO MAURA

alto contenido eroacutetico con sustantivos y metaacuteforas que recuerdan la maacutes iacutentima unioacuten amorosa en unos casos y el tierno amor maternal en otros

[T]e miro Jesus mio desnudo a las inclemencias del tiempo y ardien-do en puro fuego de Amor por la salud de las Almas y me ensentildeas a que te ame con todo mi corason y puresa de espiritu No atendiendo ni buscando umanos intereses ni a solisitar consuelos ni regalos espi-rituales que suelen empantildear la puresa del noble corason No mi Jesus amable pues antes me ensentildeaste tu puro Amor que desnudo sean [sic] de encaminar mis passos desde el pesebre asta la cuna en donde te miro tan desnudo como el pesebre y todo Sentildeor por mi Amor (Mss 12959 26 hoja 1 v)

El manuscrito (12959 27) de la mencionada serie de tres contiene algunas correccio-nes quizaacute hechas por el confesor o quizaacute por ella misma cuando se dirige con excesiva familiaridad y arrebatado fervor a su Amado148 He escogido el manuscrito (12959 Caja 28) en primer lugar por ser el ejemplo maacutes representativo de su poesiacutea y prosa En este manuscrito encontramos de forma maacutes directa que alegoacuterica toda la frescura de un diaacutelogo entre Jesuacutes y el alma que raya como diriacutea Cervantes laquoa la llana y sin rodeosraquo (667 lib 2 cap 38) con el doloroso y a veces desesperado deseo de la entrega y la unioacuten final con el Amado La ortografiacutea no ha sido corregida respetaacutendose el texto ori-ginal149 Veamos el siguiente fragmento

Mira que te amo con Amor de padre y con Amor de esposo el mas fino y puro enamorado que no tan solo me presio de darte mi mano sino tambien todo mi cuerpo y sangre para que con mi pan de vida te sustentes y te regales a tus anchuras y que con mi propio espiritu vivas en paz como tu lo deseas y que mis amores sean unico alivio en tus trabajos en esta mortal vida pues si esto es asi y sabes que muero por darte vida dime esposa mia de que te fatigas Dame querida tus bras-sos y dime si me amas como yo te amo (Hoja 4)

148 La antologiacutea de Promis ha procurado insertar entre los textos antoloacutegicos algunos que se refieren a la es-critura de mujeres fundamentalmente de aquellos generados en el interior de los espacios conventuales Estos textos se fundan como laquohistorias de vidasraquo y responden casi siempre a los requerimientos de los confesores de las monjas coloniales En este sentido resulta valiosiacutesima la incorporacioacuten de la llamada Relacioacuten autobiograacute-fica de Sor Ursula Suaacuterez como una muestra significativa de la escritura monjil entendida en esta eacutepoca (como tambieacuten en la tradicioacuten europea medieval) inserta en las denominadas laquolabores de manoraquo de las religiosas ya que el texto escrito por mandato se convertiacutea en una suerte de entramado o tejido linguumliacutestico es decir en un nuevo bordado que la mayor parte de las veces el confesor convertido en censor iba haciendo tachando y enmendando En la antologiacutea Promis agrega un texto de Sor Tadea Garciacutea de la Huerta titulado Relacioacuten de la inundacioacuten que hizo el riacuteo Mapocho de la ciudad de Santiago de Chile en el monasterio de Carmelitas titular de San Rafael el diacutea 16 de junio de 1783 se trata de un poema tipo romance escrito en versos octosilaacutebicos y que da cuenta de lo sucedido ese diacutea en el convento (Resentildea de la literatura del reino de Chile de Joseacute Promis Eddie Morales Pintildea httpwwwupaclpublicaciones2002literatura_promishtm)

149 Son frecuentes las faltas ortograacuteficas Una de ellas es el uso constante del seseo La ausencia de acentua-cioacuten y puntuacioacuten exceptuando alguacuten punto o coma arbitrario no seguido casi nunca de mayuacutescula inicial lo mismo que el uso igualmente aribitrario de la h o de b v r q g j m n x etc No olvidemos de la misma forma la laxitud linguumliacutestica existente en el siglo XVII (no sabemos a queacute parte de eacuteste pertenece el manuscrito) asiacute como la joven edad de la monja

171ESPANtildeOLAS DE ULTRAMAR EN LA HISTORIA Y EN LA LITERATURA

Los versos del presente manuscrito poseen la misma fuerza que tiene su prosa Con una estructura estroacutefica indefinida estaacuten aparentemente corregidos por alguien que tu-vo la oportunidad de conocer personalmente a la autora Muy probablemente se trate del padre al que hace referencia al principio del primer manuscrito laquoMandame el Pd que le declare en que consiste un verdadero amor a Diosraquo a continuacioacuten continuacutea con su caracteriacutestica humildad laquo[O]bedesere y dire lo q Dios me inspire segun mi rudesa y simplisidadraquo (Mss 12959 26) En cuanto a la fuerza pasional de esta joven observamos con cierta tristeza coacutemo aparece sublimada en sus escritos con toda la enegiacutea de una joven mujer llena de intensidad y vida pero encerrada en los liacutemites de un convento Veamos un ejemplo en donde responde el Alma en los siguientes versos

O mi enamorado Jesus O mi dulse y tierno amanteO alegria de los sielos O dulse Jesus amable

(Toda Sentildeor me derrito toda Sentildeor me desagoy quiero vivir por ti ea sentildeor abrasadme) [Tachado en el original]

Toda Sentildeor me derrito toda Sentildeor me desagoy quiero morir por vos ea Sentildeor que ya acabo

Ya tus amores me llaman ya tus perfumes me traencon suspiros y agonias Sentildeor hasta que te alcanse

O mi Jesus amoroso no puedo mas dilatarmeya la pasiensia me falta dulse Jesus abrasadme

(No puedo vivir sin vos no puedo mas dilatarmeya la pasiensia me falta dulse) [Tachado en el original]

No puedo vivir sin vos mi dulse Jesus amablepues me teneis echisada siendo mi esposo y mi Padre

Ay que me abraso Ay que me quemo del Amor deJesus nasareno como no tocan y tantildeen a fuego150

Estos versos llenos de arrebato sublimado conectan con toda la tradicioacuten miacutestica es-pantildeola que se remonta a Ramoacuten Llul y que culmina en el maacutes universal de nuestros

150 En toda la fuerza y simbologiacutea del amor maacutes iacutentimo del maacutes alto y sublime placer de la unioacuten de los amantes tal como lo encontramos en el Cantar de los Cantares y en San Juan de la Cruz Leemos en la Biblia

Ya me he quitado la tuacutenica iquestCoacutemo volver a vestirme Ya me he lavado los pies iquestCoacutemo volver a ensuciarlosMi amado metioacute su mano por el agujero (de la llave) y mis entrantildeas se estremecieron por eacutel Me levanteacute para abrir a mi amado Mis manos destilaron mirra y mis dedos mirra exquisita en el pestillo de la cerradura (5 3-5)

Nos ocurre lo mismo con San Juan de la Cruz en su insuperable poema laquoLlama de amor vivaraquo

iexclOh cauterio suaveiexclOh regalada llagaiexclOh mano blanda iexclOh toque delicadoque a vida eterna sabey toda deuda pagaMatando muerte en vida la has trocado

172 JUAN FRANCISCO MAURA

miacutesticos San Juan de la Cruz Esta tradicioacuten se extiende hasta finales del siglo XVII esto es hasta los finales del Barroco siendo un poco maacutes tardiacuteo en la Ameacuterica espantildeola Sin tener como propoacutesito discutir en el presente trabajo a queacute corriente miacutestica pertenece la obra de Sor Nada es necesario resaltar no obstante el hecho de que estaacute escrito por una mujer y ademaacutes de tierna edad El manuscrito 12959 Caja 26 termina con estas pa-labras laquo[T]odas estas boverias escrivi por entretenimiento siendo resien profesa en la religion Sor Nadaraquo Mas no por la juventud de su autora los escritos dejan de tener lo-gradas metaacuteforas imaacutegenes y siacutembolos sacados de la naturaleza La alegoriacutea de la unioacuten matrimonial poseeacute el fuego liacuterico de la maacutes apasionada de las relaciones amorosas vivi-ficada por perfumes flores insectos animales escarchas nieves o abrojos Por lo tanto aunque la narracioacuten destile cierta ingenuidad no carece por ello de un vocabulario rico con el sabor popular de la poesiacutea de los cancioneros y romances de tradicioacuten renacen-tista No ha sido otra mi intencioacuten que la de rescatar del olvido unos escritos en prosa y en verso llenos de frescura y espontaneidad que nos muestran la pasioacuten con que la joven novicia se laquoentrega en cuerpo y almaraquo a los menesteres de su profesioacuten guiada por un padre espiritual en esos primeros antildeos de formacioacuten Esta ha sido la razoacuten por la que presento a continuacioacuten el citado manuscrito en su totalidad

Sor Nada (Mss 1295928)

laquoEsplicacion sobre en que consiste la paz del AlmaraquolaquoQuartillas a un Alma que padece soledad interiorraquo

[7 hojas utiles en 4ordm letra del siglo XVII]

+

Esplicacion sobre en que consiste la paz del Alma

Pareseme segun mi rudo entender que la verdadera paz del Alma con-siste en una muy pura y buena consiencia en un corason liso y bien intensionado en una verdadera rectitud de espiritu en el qual el Alma procura bolar a Dios sin jamas detenerse a respetos umanos ni reparar en que me diran ni de que me censuraran sino me apresuro a seguir a unos entenderes y pareseres dorados en los quales pretende el mundo engantildear y ensuciar si se puede la puresa de un corason unicamente de Dios y de su Santa ley y se lo conserva cristalino con la divina asis-tencia de la gracia y comprendido de su Amor y temor siguiendo la luz divina de tan amante Sentildeor Dios y ombre verdadero con que este ilustrado corason ni se altera ni se mueve por los disfrasses dorados que ase el mundo y sus moradores mayormente con falssas amistades aunque con ellos muestre buena intension Con la misma grasia y luz de Dios conose el buen corason estos disfrasses que le ase el mundo y se retira de todo con espiritu y valor esto sin la menor alterasion sino que en suma paz se retira a buscar a Dios dentro de su mismo corason

173ESPANtildeOLAS DE ULTRAMAR EN LA HISTORIA Y EN LA LITERATURA

y se abrasa con su pura verdad en la qual se le descubren mil interio-res secretos tan solidos puros y verdaderos que la misma Alma queda abismada y de puro grandes no los puede bien comprender ni esplicar pero estos mismos secretos divinos le sirven de espuelas para no solo correr sino bolar con pies de plumas en seguimiento de su bien ama-do Jesus y como este soberano Sentildeor es tan amante de sus espossas las Almas luego que la ve bolar con pies de plumas la sale al encuen-tro en despoblado campo que se deve de llamar Campo de Amor de Dios y el mismo Sentildeor se viene a las manos por ser Dios que nos ama con Amor infinito de Padre benigno y amoroso con que asiendose en contra deso este divino enamorado en lo interyor de el Alma que le busca con ansias de servirle y amarle y en aquella soledad traban una conversasion amorosa y sensilla como la pluma simple de quien esto escrive

Divino enquentroDios y el Alma en la soledad

O Soberano Principe de la paz dise el Alma tus perfumes me traen a ti bolando porque alla en el mundo y sus valedores me pretendian engantildear y entretenerme con pegaminossas amistades que facilmen-te me pudieran envenenar y matarme apartandome de ti Mi dulse Jesus amable mi Redentor Soberano que con tantas ansias me sales al enquentro como siervo [ciervo] erido de mis Amores los quales tu Amor me ofrese para que con tu mismo Amor te ame y te sirva en paz sin perturbarme ni contristarme ni cansarme de padeser pasando si se ofrese por escarchas nieves espinas ni abrojos ni por otros diverssos trabajos ni piedras de contradision que tu me puedes permitir pues por mas que el mar se levante con sus ferosses olas contra mi ni piedras se me tiren al rostro en todo Sentildeor me quieres con serenidad pasifica sin la menor perturbasion Todo Sentildeor quieres que lo tome con Serenidad de espiritu y asi vengo a ti bolando para que mejor me ensentildees a vivir segun las leyes de tu noble condision que me son muy agradables por mas que el mundo me las despresie por segir sus vanidades y torsidas intensiones con apariensias de bien y con este engantildeo y bien me quie-ro mas a mi que no a mi proximo veo que segun mi pareser se pierden muchas Almas y tambien de aquellos que se depresian y pasan por muy espirituales Con que me paresen pocos los que llegan a padeser con desnudes151 de espiritu por tu purisimo Amor y me parese essas se quedan muy atrasadas en la virtud por el peligro de bolver muy atras el paso de modo que se pueden despentildear y pereser en su misma desgra-sia ya por soberbia o por otras enfermedades que se les pega al corason y asi lo pasan como siegos ignorantes sin advertir en sus peligros

151 La letra en cursiva es miacutea

174 JUAN FRANCISCO MAURA

este aquerdo Sentildeor y otros que tu verdad me ensentildea me ase venir uyendo de las paredes del mundo y me vengo a ti Dios mio bolando con las dos Alas del Amor y temor que tu mismo Amor me ofrese tan de gracia y tan de grado que no se duentildeo mio con que lo responder a tan soberano beneficio y finesa de tus entrantildeas de Amorvengo Sentildeor y esposo mio unicamente a descansar en ti pues los peli-gros del camino me an puesto en mucho sobresalto temiendo el per-derte y sin ti perderme para siempre por una eternidad sin fin pues deseo amado mio ganarme ganandote a ti y vivir en ti aora en vida y despues eternamente y estos cuidados me traen fatigada molida y cansada y no podre tener alivio y descanso sino viendome entre tus brassos aunque sea estando en cruz pues ese es el fin de mis deseos vivir y morir en ti ablame mi cordero manso y ensentildeame a que ver-daderamente te ame como fiel esposa ea mi caro amigo dame la ma-no pues sabes Amor mio que en mi no ay mano sin tu misma mano y asi mi Dios y Sentildeor mi Principe Soberano con umilde rendimiento y deseos de alcansarte te suplico me des la mano y me consueles en estos mis trabajos Deseo Sentildeor vivir en paz y los malos amores de mi Naturaleza flaca no me dejan detentar y no quieren por mi desgrasia atropellar con las leyes de tu Amor ni quisiera perturbar mi corason quando me veo con un torvellino de olas y contratiempos que a menu-do me suelen sercar pero si tu Sentildeor me das la mano nada temo sino que me aseguro y vivire en paz sin que me fatiguen los contratiempos pues mi mano en la tuya y mi espiritu en el tuyo por mas borrascas que me envistan no seran bastantes para rendir mi voluntad a la suya bien si para pronunsiar un fiat que resuene bien atras en tus oidos y que en medio de mis fatigas me ponga a cantar tus divinas misericor-dias hea Sentildeor ya pretendo serrar mis labios por no desir mas bove-rias y deseo Sentildeor oir tus palabras de vida eterna abla Sentildeor que tu sierva oye con atension y cuydado mira mi Dios que se me ase tarde y espero con prisa deseando saborearme y aprovecharme de los ecos de tu Santa dotrina pues todas tus palabras saben a eterna vida callen pues mis sentidos y potensias y todo se ponga en paz pues mi dulse y soberano Sentildeor no se escusara de ablar me aun que en mudo silensio hea mi gran Prinsipe de la paz ablame que tus puros amores me traen perdida por estos asperos montes y mis cortos pasos no te pueden dar alcanse mirame mi Dios a tus pies postrada como un vil gusano y me-nor ormiga de la tierraabla Jesus y dise a su esposa el Alma querida esposa mia que me pides y por que te muestras tan fatigada y mal sufrida no vives como corde-rita del campo buscando de mis pechos el sustancial pasto mi Amor no te sustenta y mi grasia te promete eterna vida pues dime amada de que te fatigas y te muestras mal sufrida mira que te amo con Amor de padre y con Amor de esposo el mas fino y puro enamorado que no tan solo me presio de darte mi mano sino tambien todo mi cuerpo y

175ESPANtildeOLAS DE ULTRAMAR EN LA HISTORIA Y EN LA LITERATURA

sangre para que con mi pan de vida te sustentes y te regales a tus an-churas y que con mi propio espiritu vivas en paz como tu lo deseas y que mis amores sean unico alivio en tus trabajos en esta mortal vida pues si esto es asi y sabes que muero por darte vida dime esposa mia de que te fatigas Dame querida tus brassos y dime si me amas como yo te amoResponde el Alma152 Tu mi Dios sabes si yo te amo pues de mi solo se que mis deseos y ansias buelan a ti mas no alcanso a saber si te amo como tu de-seas ser amado y como desconfio tanto de mi y de mis prosederes falssos temo Dios mio perderme y perderte y asi Sentildeor pues no desechas mis Amores y te muestras tan fino en amarme te pido me ensentildees a vivir segun las leyes de tu pura verdad y fina condisionhija mia dise Dios la prueva de un verdadero Amor consiste en sufrir callar y padeser por mi unico Amor y en todo seguir mis pasos sin ja-mas retroseder por mas fragoso que se muestre el camino pues nunca seran tantas las espinas las escarchas ni las nieves ni los vientos bo-rrascosos que te se ofrescan pasar por mi Amor como los que mi tierno y desinteresado Amor paso por ti y siempre con mis pies descalssos y asi hija y esposa mia muestrate costante en seguir lo perfecto de mis passos pues mi braso fuerte sera en ti y peleara por ti y te sera el todo en tus nesesidades y mi Amor te convertira en dulse y suave lo amargo y molesto a la condision de la carrne

Responde el Alma

O mi enamorado Jesus O mi dulse y tierno amanteO alegria de los sielos O dulse Jesus amable

(Toda Sentildeor me derrito toda Sentildeor me desagoy quiero vivir por ti ea sentildeor abrasadme) [Tachado en el original]

Toda Sentildeor me derrito toda Sentildeor me desagoy quiero morir por vos ea Sentildeor que ya acabo

Ya tus amores me llaman ya tus perfumes me traencon suspiros y agonias Sentildeor asta que te alcanse

O mi Jesus amoroso no puedo mas dilatarmeya la pasiensia me falta dulse Jesus abrasadme

(No puedo vivir sin vos no puedo mas dilatarmeya la pasiensia me falta dulse) [Tachado en el original]

No puedo vivir sin vos mi dulse Jesus amablepues me teneis echisada siendo mi esposo y mi Padre

152 La aparicioacuten de una mayuacutescula al principio de una oracioacuten es algo totalmente arbitrario en este ma-nuscrito dada la libertad ortograacutefica de la autora Como se puede observar en la mayor parte de las veces no es el caso

176 JUAN FRANCISCO MAURA

Ay que me abraso Ay que me quemo del Amor deJesus nasareno como no tocan y tantildeen a fuego

Responde Jesus Hija mia tus simples vozes oygo y aunque resuenan bien a mis oidos pero te deseo mas mansa y pasifica en tus fervores ya sabes que no siempre as de vivir en mantillas ni a los pechos de tu Madre por que es rason que padescas con espiritu fuerte como mu-jer valerosa por que a una esposa del Rey soberano y prinsipe de la paz no le estan bien chiquerias ni fervores de nintildea malcriada y ya es ora que la destete su Madre la Naturaleza y que empesando su nueva vida camine con el favor de mi grasia sigiendo mis passos de eterna vida esto con sus pies descalssos segun mis leyes de Amor puro y desinteresado lo tienen ordenado153 y vivir en paz como lo deje en-cargado a mis apostoles Santos repitiendoles varias vezes Vivir en pas y caridad esto es un vivir en Dios y Dios en el Alma y asi hija mia el Alma que vive en paz vive en mi Como mis cortesanos en el cielo y pues me pides que te ensentildee a vivir segun las leyes de mi condision Repito el desir que te debes mostrar sufrida en todo tiempo y estado sin permitir en tu corason que ni aun los fervores se adelanten con estremos ni ademanes sino atiende y aprende de mi purisima Madre pues siempre la veras si bien lo consideras que mientras vivio en el mundo en todos sus trabajos se mostro firme fuerte costante como piedra diamante Pues mirandome nintildeo entre sus brasos desnudo en el pesebre desnudo y crusificado en los brassos de una cruz En estos y otros passos no se mudo su rostro sino que en suma serenidad y pasifico corason toda se sacrificaba enteramente en los brassos de mi Amor y rendido su corason y voluntad en la de mi eterno Padre por ejemplo te la doy y deseo que aprendas de sus nobles calidades pues te aseguro carisima que las leyes de mi condision y pura verdad todo lo allaras enserrado en el corason de mi purisima Madre sedle fiel y descansaras en paz

+

Quartillas a un alma que padese soledad interior

1Un Alma afligida y tristese ve en un campo desiertay en el su esposo la tieneAtormentada y sedienta

153 Es a traveacutes de estas liacuteneas lo que hace suponer que la autora de este diaacutelogo amoroso entre el Alma y Je-suacutes es novicia esto es laquoque estaacute empesando su nueva vidaraquo En las mismas liacuteneas una vez maacutes se hace alusioacuten al laquodesteteraquo de su vida civil laquoa una esposa del Rey soberano y principe de la paz no le estan bien chiquerias ni fervores de nintildea malcriada y ya es ora que la destete su Madre la naturalesaraquo (fol 5)

177ESPANtildeOLAS DE ULTRAMAR EN LA HISTORIA Y EN LA LITERATURA

2Pendiente se ve en el AyreSolo un hilo la sustentasin tocar el pie en el sueloporque del no tome tierra

3Mirandola esta yto a ytoaquel sol que la atraviesay la enviste con sus rayosmas ella no pestantildeea

4Como sigarra padese y como a tal se atormentabatiendo sus mismas Alasy el corason se atraviesa

5Con penas sustos temoresquando se mira assi mesmasin tener valor en nadaporque es la misma flaquesa

6Pero el Amor de su esposotoda su atension le llevay la pone en un abismopero cubierto en tiniebla

7Desea dar algun bueloy subir con ligeresapero se mira travadacon una fuerte cadena

8Clama suspira y padeseMas del todo se sujetaRindiendo su voluntadA la divina clemencia

9Los enemigos del AlmaCruelmente le asen guerray ella aunque firme y constantelos reselos la atormentan

178 JUAN FRANCISCO MAURA

10de todos modos padeseaunque gosa la asistensiadel divino esposo amadoque en su interior se recrea

11Solo de verla penary con verla tan serenadise resibe mil gustosde su sigarra pequentildea

12Le sabe el mundo a mil yelesy su trato le atormentaviendo en el mil falsedadesque todas saben a tierra

13Para poderse librardeja de correr y buelacon las Alas del Amory el mismo Amor se la lleva

Una vida dedicada a un amor divino un amor que le haraacute llenar un buen nuacutemero de cuartillas dedicadas a tan alta empresa Se desconoce si la vocacioacuten de Sor Nada con-tinuoacute con tanta intensidad el resto de sus diacuteas Ciertamente la vida en el covento no era faacutecil En algunos casos la experiencia era traumaacutetica incluso fatal para algunas de las adolescentes de la Ameacuterica Espantildeola Las reglas del claustro eran severas por varias razones Estas joacutevenes si no teniacutean el permiso de la superiora no podiacutean recibir visitas no podiacutean volver a sus casas su correspondencia era censuraba y no podiacutean salir del periacutemetro conventual Igualmente se levantaban antes del amanecer para oir misa tra-bajaban el resto del diacutea y lo maacutes interesante es que muchas veces esta vida era aceptada por muchas

Page 21: Tercera parte: Mujeres en la vida intelectual - …parnaseo.uv.es/Editorial/Maura/TerceraParte.pdf · La Biblia, por su parte, hace repetidas menciones de la mujer y sobre el comporta-

151ESPANtildeOLAS DE ULTRAMAR EN LA HISTORIA Y EN LA LITERATURA

gozaba de maacutes privilegios Era maacutes bien al contrario En las carreteras las mujeres segla-res no inspiraban el mismo respeto que las monjas que ademaacutes teniacutean contacto cons-tante con personas de los dos sexos no pertenecientes a la Iglesia (Arenal 297) Ademaacutes dentro de las murallas del convento desapareciacutean muchas de las barreras sociales que limitaban a la mujer de esta eacutepoca

La presencia femenina y la monarquiacutea

Pues iquestcoacutemo sabes tuacute preguntoacute don Quijote que los grandes llevan detraacutes de siacute a sus caballerizos Yo seacute lo direacute respondioacute Sancho Los antildeos pasados es-tuve un mes en la corte y alliacute vi que paseaacutendose un se-ntildeor muy pequentildeo que deciacutean que era muy grande un hombre le seguiacutea a caballo a todas las vueltas que daba que no pareciacutea que era su rabo Pregunteacute que coacutemo aquel hombre no se juntaba con el otro sino que siempre anda-ba tras deacutel Respondieacuterome que era su caballerizo y que era uso de grandes llevar tras siacute a los tales Desde enton-ces lo seacute tan bien que nunca se me ha olvidado (Cervan-tes Don Quijote)

Los monarcas espantildeoles fueron conscientes de que sin la presencia femenina difiacute-cilmente se podriacutea solidificar una conquista a todos los niveles La mayor parte de los virreyes y altos cargos trajeron a sus mujeres con ellos y en las ciudades principales de Hispano-Ameacuterica como la ciudad de Meacutexico Guatemala Lima o Potosiacute habiacutea mujeres que disfrutaban de una esmerada educacioacuten (gramaacutetica latiacuten poesiacutea historia muacutesica) Esto dariacutea origen a una elegante y hasta cierto punto sofisticada sociedad en la que las mujeres tomaron parte en asuntos maacutes importantes que los que sus homoacutelogas toma-ran en las colonias portuguesas laquoThere were brilliant vice-regal courts at Mexico City and Lima far exceeding anything that could be found in Portuguese or English America during the seventeenth centuryraquo (Boxer 39) Las estadiacutesticas con las que contamos hoy no soacutelo demuestran que las mujeres llegaron al Nuevo Mundo en respetables porcen-tajes sino que ademaacutes tuvieron una participacioacuten activa llegando a intervenir en algu-nos casos en las liacuteneas de vanguardia Resulta difiacutecil aproximarse al estado de aacutenimo de aquellas mujeres que vivieron en eacutepocas tan lejanas Para ello es necesario indagar en los documentos de la eacutepoca para lograr rescatar del pasado todos esos tesoros de la historia muchas veces tergiversados y manipulados con el fin de que sirvan a propoacutesi-tos actuales Es en los viejos manuscritos donde queda testimoniada su presencia tan rica en dolores tragedias y por queacute no en amores Fue la llegada de estas mujeres una brisa de esperanza y de ilusioacuten para aquellos que ya estaban en las tierras de ultramar y

152 JUAN FRANCISCO MAURA

veiacutean venir de su propia tierra aquello que maacutes antildeoraban amantes madres hermanas Un haacutelito de vida y poesiacutea que suavizaba las costumbres de estos rudos y romaacutenticos pioneros laquoporque para ser hombres de tales empresas algo de romaacutentico debioacute de existir en ellos y que es tan propio del espantildeol y abandonariacutean en brazos tan gentiles sus bruscos modales que habiacutean adquirido en aacutespero contacto en selvas y montantildeasraquo (Villafantildee 125)

Hoy sabemos que en la normativa oficial de la Espantildea del siglo XVI y XVII se favoreciacutea el paso de mujeres al Nuevo Mundo Afirmar lo contrario no solamente es falso sino que implica un desconocimiento total de los primeros dos siglos de la colonizacioacuten espantildeola La presencia de estas mujeres espantildeolas fue efectiva laquolas disposiciones al respecto demuestran claramente que se teniacutea especial intereacutes en su arraigo y que se tra-taba de defender su posicioacuten de mujeres casadas con conquistadores y colonizadoresraquo (Villafantildee 126) Los monarcas comprendiacutean que era praacutecticamente imposible que los hombres viviesen sin mujeres y que de ser asiacute era de esperar que se cometiesen abusos con las indias lo que incidiriacutea en la moral social y en el buen gobierno de la colonia Ademaacutes sin un asentamiento definitivo con hogares y familias difiacutecilmente se podriacutea llevar a cabo una presencia permanente en las nuevas colonias (Orsquo Sullivan-Beare 45)

Empezando por los Reyes Catoacutelicos la preocupacioacuten de que en las colonias se esta-bleciesen nuacutecleos que tuviesen como base la familia cristiana fue clara Las capitulacio-nes que a este efecto se hicieron entre los conquistadores y la Corona fueron nume-rosas La efectuada entre Rodrigo de Baacutestidas y Carlos V puede ser un buen ejemplo Fechada en Valladolid el 6 de noviembre de 1524 muestra el propoacutesito de Baacutestidas de establecer una colonia permanente en la desembocadura del riacuteo Magdalena en el terri-torio que hoy vendriacutea a corresponder a Colombia El documento firmado por el Empe-rador comienza asiacute

El Rey Por cuanto por parte de vos Rodrigo de Baacutestidas vecino de la ciudad de Santo Domingo de la Isla Espantildeola Me fueacute fecha relacioacuten que por servicio de la Catholica Reyna Mi Sentildeora e Nuestro os ofre-ceacuteis de poblar e poblariades la provincia e puerto de Santa Marta que en Castilla de Oro llamada la Tierra Firme e que la poblariades dentro de dos antildeos siguientes haciendo en ella un pueblo en que no menos haya en eacutel al presente cincuenta vezinos que los quince de ellos sean casados y tengan consigo a sus mujeres y que lo teniades fecho dentro de dos antildeos y de hoy en adelante lo maacutes que fuese posible asiacute de cris-tianos espantildeoles como de indios (Restrepo 1 30)

De igual manera el priacutencipe Felipe (futuro Felipe II) en las capitulaciones establecidas en 1547 con Juan de Sanabria para que eacuteste fuese como gobernador y capitaacuten general de la dicha provincia escribe lo siguiente laquoPrimeramente que seais obligado e os obligeis a llevar destos Reynos de Castilla a la dicha provincia del Rio de la Plata cien casados con sus mujeres e hijos para poblar la dicha provincia y con ellos llevareis a vuestra muger e hijos (CDI de Ameacuterica y Oceaniacutea 23 119)

En numerosas ocasiones se pone de manifiesto el apoyo de la monarquiacutea a la emigra-cioacuten femenina tantas que difiacutecilmente se podriacutean enumerar todos los casos Lo cierto es que la legislatura vigente favoreciacutea la emigracioacuten y traslado de mujeres con toda una se-

153ESPANtildeOLAS DE ULTRAMAR EN LA HISTORIA Y EN LA LITERATURA

rie de alicientes137 sobre todo si eacutestas estaban casadas pasaje para llevar a las familias franquicia de derecho para los artiacuteculos que portasen consigo favoritismo en cargos destinos y contrataciones a aquellos que pasasen con sus mujeres incluyendo ademaacutes de los castellanos y leoneses a suacutebditos de otras partes de la corona incluso genoveses y portugueses si estos veniacutean acompantildeados de sus consortes (Fernaacutendez Duro 15-16)

Incluso se llegoacute a imponer penas a aquellos hombres casados que no llevasen a sus mujeres con ellos a Indias en el teacutermino de un antildeo El mismo emperador en una ceacutedula otorgada al virrey de la Nueva Espantildea le recomendaba que laquoprocurase persuadir a ca-sarse a los solteros que estuviesen en edad y situacioacuten de hacerloraquo prometieacutendoles que al efectuar el matrimonio seriacutean preferidos en el reparto de indios En la isla de San Juan de Puerto Rico los cargos oficiales y oficios puacuteblicos debiacutean de ser desempentildeados por los casados en primer lugar En Meacutexico ocurrioacute lo mismo con los cargos de corregido-res (Konetzke laquoemigracioacutenraquo 140-41) Felipe II al igual que sus antecesores y sucesores reiteraraacute y justificaraacute los beneficios de los que seraacuten acreedores aquellos que tengan allaacute a sus mujeres laquoque los que han servido en los descubrimientos de las dichas Indias y tambieacuten los que ayudan a la poblacioacuten dellas que tienen allaacute sus mugeres sean preferi-dos en los aprouechamientos qualesquierraquo mandando que despueacutes de los conquistado-res se tuviera en cuenta para la laquoprovisioacuten de los corregimientosraquo a los colonos casados siempre que estuvieran capacitados para dichos cargos (Konetzke laquoemigracioacutenraquo 141)

Las disposiciones en favor del matrimonio son claras ya sea por medio de un favo-ritismo manifiesto como en los casos antes citados o mediante medidas de cohercioacuten para que esta poliacutetica se llevase a cabo Don Sebastiaacuten Ramiacuterez de Fuenleal obispo de Santo Domingo y presidente de la Audiencia de Meacutexico propuso que a aquellos enco-menderos que no estuviesen casados y que no hubiesen tomado parte en la conquista se les quitase los indios concedidos con la obligacioacuten de devolveacuterselos si en el plazo de un antildeo habiacutean contraiacutedo matrimonio (Konetzke laquoemigracioacutenraquo 142-43) Por supuesto hubo excepciones a estas reglas En algunos casos ni la mujer teniacutea especial intereacutes en vivir junto con su marido en las Ameacutericas ni el marido queriacutea ir a buscar a su mujer pasado el plazo de un antildeo En el presente documento y de forma excepcional las auto-ridades reales protegen a los conyuges para que puedan seguir viviendo separados en continentes diferentes

Nuestras justicias de la ysla de Cubagua e otras qualesquier de las nuestras Yndias yslas e tierra firme del mar oceacuteano e a cada uno e qualquier de vos a quieacuten esta mi ceacutedula fuese mostrada por parte de Alonso de Tapia nuestro veedor de la provincia de Paria me ha sido hecha relacioacuten que ha mucho tiempo que reside en esas partes donde nos ha servido en lo que se ha ofrecido e que agora vos otros le apre-miaacuteis a que venga o embiacutee a estos Reinos por su muger lo cual no puede al presente hazer a causa de no ter posibilidad para ello a mi me ha suplicado vos mandase que no le compeliacuteesedes ny apremiaacutesedes a que viniese o enviase por la dicha su muger y dieacutesedes por libres los fiadores que tenyades para que dentro de un antildeo embiariacutea o verniacutea por

137 Reales Ceacutedulas de los antildeos 1502 y 1503 Academia de la Historia Coleccioacuten Muntildeoz tomo 75 fols 209 y 220 citado por Fernaacutendez Duro 15

154 JUAN FRANCISCO MAURA

ella o como la mi merced fuese lo cual visto por los de nuestro consejo juntamente con una peticioacuten presentada por dontildea Mariacutea Gudiel muger del dicho Alonso de Tapia por la cual nos suplica lo mismo que acor-dado que debiacutea mandar esta mi ceacutedula para vos por la qual vos mando que no compelaacuteis ni apremieacuteis al dicho Alonso de Tapia a que venga ni enviacutee a estos reinos por la dicha su muger si no fuere a que la pro-vea de lo que fuere necesario para su mantenimiento y deys por libres quales quier fianzas que sobre ello haya dado e no fagades ende al por alguna manera Firmado en la villa de Valladolid a VII diacuteas del mes de febrero de mil e quinientos e treinta y siete antildeos yo el licenciado Con-de de Samano y sentildealada del cardenal Beltraacuten y Carbajal [Aparte en letra pequentildea] Este diacutea se despachoacute una provisioacuten por la cuaacutel su Mag hizo merced a Alonso de Tapia de la veedoriacutea de la provincia de Paria por muerte de Garciacutea de Aguilar con las clausulas ordinarias y con el mismo salario que teniacutea Aguilar Firmado del emperador y de Beltraacuten y Bernal y Velaacutezquez El Rey (Registro de disposiciones Riacuteo Marantildeoacuten AGI Indiferente General Legajo 416 libro 2 Fols 94v y 95r)

El punto maacutes interesante a destacar de todas estas disposiciones oficiales en cuanto a la emigracioacuten femenina al Nuevo Mundo no es otro que la libertad que se da a la mujer de decidir si quiere o no casada o sin casar trasladarse al nuevo continente no como una imposicioacuten sino como un precepto laquoel espiacuteritu de las disposiciones en el sentido de asegurar la vida marital de los casados significa que la mujer que su marido invita a pa-sar a las Indias puede negarseraquo (Villafantildee 127) Habriacutea que ver las opciones laquorealesraquo ade-maacutes de las legales y econoacutemicas que le quedaban a la mujer si tomaba esta decisioacuten

El saber la libertad de eleccioacuten que estas mujeres teniacutean de antemano antes de aden-trarse en las interminables penalidades y aventuras que los viajes de la navegacioacuten tran-soceaacutenica suponiacutean hace que sus hechos y esfuerzos cobren auacuten maacutes relieve En nume-rosas ocasiones estas mujeres cruzaron el oceacuteano una y maacutes veces sin otro motivo que el de defender los derechos e intereses de los suyos Lo que resulta maacutes valioso de todo esto es que lo hicieran por propia iniciativa arriesgando sus vidas para que se hiciese justicia y para que no les faltase lo necesario a aquellos que estaban en la otra orilla Las autoridades vigentes conocedoras de los vaciacuteos legales existentes en las nuevas colo-nias se apresuraron a poner en vigor aquellas normas que redundaran en el beneficio de los menos favorecidos por las circunstancias La institucioacuten del matrimonio cuya trans-cendencia es fundamental en la vida juriacutedica y social de la mujer tuvo que ser legislada en Ameacuterica con una serie de nuevas disposiciones agregados modificaciones y aclara-ciones Asiacute pues la legislacioacuten de base espantildeola tuvo que sufrir en tierras americanas esta serie de cambios por motivos poliacuteticos y sociales (Villafantildee 126)

Para hacer un sumario de lo dispuesto hasta el siglo XVI en cuanto a la legislacioacuten de las mujeres que teniacutean familia o intereses en Indias merece la pena mencionar que existieron una serie de disposiciones que protegiacutean a las mujeres para que eacutestas no se viesen abandonadas por sus maridos En un epiacutegrafe de la Recopilacioacuten de 1680 (libro VII tiacutetulo 3) se deja ver claramente la preocupacioacuten de las autoridades en este asunto laquoDe los casados en Espantildea e Indias que estaacuten ausentes de sus mujeres y esposasraquo (Vi-llafantildee 126-27)

155ESPANtildeOLAS DE ULTRAMAR EN LA HISTORIA Y EN LA LITERATURA

La lista de disposiciones se hace interminable En los reinados de Fernando el Catoacute-lico Carlos V Felipe II Felipe III o incluso Carlos II la insistencia es constante La ra-zoacuten de esta insistencia seriacutea bastante obvia dado que con un oceacuteano por medio seriacutean muchos los que se aprovechasen de llevar una doble vida marital sin el estricto control y vigilancia de sus mujeres que se encontraban en la peniacutensula La ley XXVII libro IX tiacutetulo XXVI determina laquoDeclaramos por personas prohibidas para embarcarse y pasar a las Indias todos los casados y desposados en estos reinos lsquosino llevaren con ellos sus mujeresrsquo aunque sean virreyes oidores gobernadores o nos fuesen a servir en cual-quier cargo y oficios de Guerra Justicia y Hacienda porque es nuestra voluntad que todos los susodichos lleven a sus mujeresraquo (Villafantildee 127) laquoLos eclesiaacutesticos eran los en-cargados de dar cuenta a los tribunales competentes de aquellos que estando casados permaneciacutean en Indias sin sus mujeres Son reiteradas las disposiciones de Fernando el Catoacutelico en este sentidoraquo138 En 1514 el rey don Fernando ordena en una provisioacuten para la isla Espantildeola laquodoy licencia eacute facultad aacute cualquier persona naturales de estos Reynos para libremente se puedan casar con mujeres naturales de esa dicha ysla sin tener que incurrir por ello en pena algunaraquo (Villafantildee 129)

No se debe olvidar tampoco a aquellas mujeres que decidieron pasar a las laquonuevas tierrasraquo solteras Estas mujeres tambieacuten tuvieron un papel importante en el desarrollo de las nuevas colonias Los organismos espantildeoles del momento como los mandatarios indianos y todos los cronistas no dejaron pasar desapercibida la importancia social de estas mujeres en la poliacutetica de poblamiento laquo[E]s cierto que los pueblos de Indias nuevamente poblados no se tienen por fijos o estables ni permanentes hasta tanto que mujeres espantildeolas entren en ellos y los encomenderos y conquistadores se casen por muchas causas y respetos buenos y saludables que para ello hayraquo (Villafantildee 126-27)

Si la intencioacuten era la de una presencia permanente en las tierras americanas la mujer soltera que pasase a ellas siempre seriacutea un motivo maacutes para el colono o conquistador de continuar en el mismo suelo Se podriacutea empezar una familia si asiacute se quisiese sin tener que pensar en volver a la metroacutepoli ya fuese a disfrutar de los bienes adquiridos o a laquobuscarraquo una esposa El problema aparecioacute cuando se produjo un exceso de mujeres solteras lo que de alguna manera alteroacute la estructura social existente ya que no habiacutea muchas opciones para ellas aparte del matrimonio o el convento

En consideracioacuten a que la experiencia habiacutea demostrado que un exce-sivo nuacutemero de mujeres ejerciacutea perniciosa influencia sobre la moral y las costumbres se suplicaba al rey no otorgase a aquellas tantas auto-rizaciones para emigrar al Peruacute La ciudad de la Plata fundada en 1538 emite en 1577 un informe en el que se expone la urgente necesidad de que se funde un convento de monjas pues en el territorio de las Au-diencias de Los Charcas existiacutea un gran nuacutemero de muchachas que no pudieacutendose casar se hallaban en gran peligro de perderse (Konetzke laquoemigracioacutenraquo 149)

138 Solorzano Pereira Juan de Libro Primero de la Recopilacioacuten de las Ceacutedulas Reales Cartas y Provisiones y Or-denanzas Reales Noticia preliminar de Ricardo Levenne Universidad de Buenos Aires Facultad de Derecho Y Ciencias Sociales Pub del Instituto de Historia del Derecho Argentino Coleccioacuten de Textos y Documentos para la Historia del Derecho Argentino t V Buenos Aires Imp de la Universidad de Buenos Aires 1945 (Li-bro I Ley 10 laquoQue los Espantildeoles puedan casar con Indias y al contrario a su voluntadraquo t2 p 138 citado en Villafantildee 129

156 JUAN FRANCISCO MAURA

Entristece ver coacutemo se manejan las cifras de estas mujeres como si de ganado o de bienes suntuarios se tratase Por otra parte existieron irregularidades como la de pobla-doras espantildeolas que vivieron amancebadas con hombres que ya estaban casados en la peniacutensula Normalmente esto ocurriacutea cuando la estancia del conquistador se prolonga-ba maacutes de lo debido en lugares donde habiacutea pocas espantildeolas Muchas veces nacieron hijos de estas uniones que hicieron auacuten maacutes difiacutecil la situacioacuten para las mujeres que esperaban en Espantildea a un marido que ya no teniacutea ningunas intenciones de volver En los juicios de residencia los documentos acostumbran a citar estos casos ya que era parte de su obligacioacuten castigar las irregularidades extramatrimoniales y salvaguardar las buenas costumbres familiares que con tanto intereacutes se deseaba mantener laquoUn ejemplo nos lo da la isla de Cuba donde en 1532 viven con hombres casados Olalla Hernaacuten-dez Santillana Aranda lsquola Cordobesarsquo Catalina de Leoacuten Catalina Saacutenchez Francisca Hernaacutendez Mayor de Azebedo Juana de Valeros y lsquouna mujer que estaba en casa de Ayalarsquoraquo (Borges 416)

Estos casos no fueron aislados y mucho menos en Cuba centro neuraacutelgico de todo el movimiento de ida y vuelta entre la metroacutepoli y el Nuevo Mundo Estas ocho acusa-ciones por lo tanto no tienen porqueacute considerarse extraordinarias y menos en el lugar maacutes cosmopolita de las Indias en esos momentos al que llegaban flotas a cada momen-to Al parecer existieron casos parecidos en el Riacuteo de la Plata Peruacute y Nueva Espantildea (Ratcliffe 347) El margen legal para que estas mujeres viviesen como quisiesen estuvo limitado por una moral que veiacutea uacutenicamente en el matrimonio o el convento una salida laquovaacutelidaraquo para que fueran aceptadas socialmente Los hombres en iguales circunstan-cias fueron juzgados por una laquomoralraquo mucho maacutes permisiva

La mujer y el cuerpo eclesiaacutestico

Pues iquestquieacuten diablos os traiacutedo aquiacute dijo don Quijote siendo hombre de la iglesia iquestQuieacuten sentildeor replicoacute el caiacutedo laquomi desventuraraquo Pues otra mayor os amenaza dijo don Quijote sino me satisfaceacuteis a todo cuanto primero os pregunteacute (Cervantes Don Quijote )

Otro factor a tener en cuenta en un anaacutelisis sobre la presencia de la mujer en el Nuevo Mundo es el que tiene que ver con la institucioacuten maacutes importante de las que llegaron desde Europa la iglesia catoacutelica Sin aacutenimo de criticar a tan compleja institucioacuten res-ponsable de gran parte de los aconteceres en el Nuevo Mundo vale la pena analizar algunas singularidades Muchos de sus miembros fueron grandes ejemplos de valor e inteligencia a la hora de tratar los maacutes variados y escabrosos asuntos con los que se encontraron los cristianos en la otra orilla durante este periacuteodo Se debe resaltar tam-

157ESPANtildeOLAS DE ULTRAMAR EN LA HISTORIA Y EN LA LITERATURA

bieacuten su caraacutecter medieval en la manera de hacer apostolado y de entender y tratar a los potenciales cristianos Si se tienen en cuenta los privilegios y prerrogativas que algunas de las altas jerarquiacuteas eclesiaacutesticas tuvieron no seriacutea superfluo estimar que un respeta-ble porcentaje de la poblacioacuten de origen laquodudosoraquo muy bien podiacutea venir de la misma iglesia Fueron muchas las viacutectimas y muchas las familias divididas por un padre laquoinvi-sibleraquo Gran parte de los hijos o laquosobrinosraquo de estos sacerdotes pasaron a ocupar cargos similares incluyendo los privilegios que estos cargos llevaban consigo como si se trata-se de cualquier otro oficio gremial transmitido generacionalmente regla tan comuacuten en la Europa medieval Todaviacutea a finales del siglo XIII en Espantildea los derechos de los hijos y nietos de los sacerdotes estaban protegidos por la ley sin que hubiesen podido ser erradicados por las reformas gregorianas (Ratcliffe 347)139

Las letras espantildeolas ya se haciacutean eco de estos lances amorosos entre representantes de la Iglesia y ciertas damas del lugar desde los tiempos del poeta riojano Gonzalo de Berceo En su obra maacutes conocida Los milagros de Nuestra Sentildeora Berceo describe con un realismo ingenuo y sencillo relatos de humor y de humanismo sobre aquellos hombres de carne y hueso que eran perdonados por la intercesioacuten de la Virgen Mariacutea Juan Ruiz por su lado haraacute de su Libro de buen amor la obra maacutes representativa en este sentido Seriacutea prolijo recordar la actuacioacuten de la Iglesia durante diversos periacuteodos de la Edad Media no soacutelo en Espantildea sino en toda Europa En la Espantildea musulmana del siglo XII concretamente en Sevilla el comportamiento de los representantes de la iglesia cristia-na (mozaacuterabe) en territorio islaacutemico es duramente criticado por el sevillano Ibn Abdun Este precioso documento muestra el estricto control y falta de confianza que existiacutea sobre la mujer prohibieacutendolas que entrasen en las laquoabominablesraquo iglesias cristianas

porque los cleacuterigos [cristianos] son libertinos fornicadores y sodomi-tas Asimismo debe prohibirse a las mujeres francas que entren en la iglesia maacutes que en diacuteas de funcioacuten o fiesta porque alliacute comen beben y fornican con los cleacuterigos y no hay uno de ellos que no tenga dos o maacutes de estas mujeres con que acostarse Han tomado esta costumbre por haber declarado iliacutecito lo liacutecito y viceversa Convendriacutea pues mandar a los cleacuterigos que se casasen como ocurre en Oriente y que si quie-ren lo hagan (Leacutevi-Provenccedilal 150)

Pese a existir una convivencia paciacutefica durante gran parte de la Edad Media entre los tres credos monoteiacutestas de Espantildea (cristianos musulmanes y judiacuteos) esto no suponiacutea que no existiese desprecio y desconfianza entre estos grupos religiosos Dice Abdun resaltando el peligro que suponiacutea que una mujer entrase en casa de un cleacuterigo cristiano de vida ceacutelibe

No debe tolerarse que haya mujer sea vieja o no en casa de un cleacuterigo mientras eacuteste rehuacutese casarse Obliacutegueseles ademaacutes a circuncidarse co-mo les obligoacute al-Mutadid pues si a lo que dicen siguen el ejemplo de Jesuacutes (iexclDios les bendiga y salve) Jesuacutes se circuncidoacute y precisamente ellos que han abandonado esta praacutectica tienen una fiesta que celebran solemnemente el diacutea de su circuncisioacuten (Leacutevi-Provenccedilal 150-151)

139 Valdriacutea la pena ver si han cambiado mucho las cosas desde hace quinientos antildeos a esta parte o si in-cluso la iglesia moderna ha retrocedido en tolerancia en cuanto a las relaciones sexuales de los representantes de la Iglesia

158 JUAN FRANCISCO MAURA

El historiador argentino Germaacuten Arciniegas recoge un pasaje ilustrativo de lo men-cionado anteriormente pero trasladado al ambiente de la colonia diciendo que incluso en poblaciones pequentildeas como Santa Fe con poco maacutes de un convento y una ermita la fragilidad de la carne enredaba a frailes soldados y virreyes por igual laquoEl buen So-liacutes que murioacute en olor de santidad con la cabeza reclinada sobre un par de ladrillos y en saya de franciscano cruzaba en las noches el solar de su palacio para ir a besar a la Marichuelaraquo (118-19)

Arciniegas recoge tambieacuten un suceso aparecido en el diario de Lima en 1667 que no tuvo que ser extraordinario durante los primeros antildeos de la colonia laquoEl fraile carmelita mdashGrande hereje y siendo sacerdote deciacutea misa gran perro lujurioso deshonesto que relatando sus maldades dijo que en cierta ciudad habiacutea conocido carnalmente a maacutes de trescientas y sesenta mujeres y en un convento de monjas habiacutea cometido muchos sacrilegios Este lo trujeron preso de Buenos Aires por Chileraquo (119)

Las controversias de la iglesia moderna sobre las relaciones que los eclesiaacutesticos de-ben tener con el sexo femenino parece que no han encontrado todaviacutea respuesta Sigue existiendo miedo y recelo a que la mujer comparta no soacutelo poder en la jerarquiacutea de la iglesiacutea sino en la vida privada de los miembros de la institucioacuten En la Nueva Espantildea el primer obispo de Meacutexico Juan de Zumaacuterraga viendo en la mujer un ser de tentacioacuten irresistible prohibioacute terminantemente la presencia de eacutestas en su casa Ni siquiera para su limpieza y aseo El franciscano Juan de Torquemada se refiere a este comportamien-to como una de las virtudes del popular obispo

Fue este benditiacutesimo prelado muy amigo de la virtud y de virtuosos y aceacuterrimo reprehendedor de vicios y viciosos y tan enemigo de la ociosidad que no permitiriacutea que alguno de su casa estuviese ocioso fue amiciacutesimo de la limpieza por lo cual jamaacutes consintioacute que mujer alguna entrase en su casa aunque fuese necesaria al servicio de ella ni nunca consintioacute que por alguna ocasioacuten subiese mujer a lo alto y aposentos de ella antes lo teniacutea todo cerrado como un monasterio porque sabiacutea (como quien tambieacuten sabiacutea) que la ocasioacuten suele derribar los maacutes fuertes y robustos corazones (450 lib 20 cap 31)

No fueron uacutenicamente miembros de la iglesia catoacutelica los que valoraron la lucha con-tra la tentacioacuten siguiendo al pie de la letra el crudeliacutesimo refraacuten laquoentre santa y santo pared de cal y cantoraquo Se tienen algunas noticias de la vida social de los primeros tiem-pos de la colonia En estos documentos se puede observar coacutemo no distaban mucho las oacuterdenes que se dictaban en la metroacutepoli y las que se llevaban a cabo en la Nueva Espantildea La vida social tanto de damas como de algunos miembros de la iglesia de las colonias era maacutes laquorelajadaraquo de lo que las normas permitiacutean Gracias a la informacioacuten ofrecida por Manuel Romero de Terreros disponemos de los nombres de las primeras virreinas

Las esposas de los primeros cinco Virreyes Don Antonio de Mendoza Don Luis de Velasco Don Gastoacuten de Peralta Don Martiacuten Enriacutequez de Almanza y Don Lorenzo Suaacuterez de Mendoza Conde de la Coruntildea fueron respectivamente Dontildea Caterina de Vargas Dontildea Ana de Cas-tilla y Mendoza hija de Don Diego de Castilla Sentildeor de Gor y Caba-

159ESPANtildeOLAS DE ULTRAMAR EN LA HISTORIA Y EN LA LITERATURA

llerizo de Carlos V Dontildea Leonor de Vieo Dontildea Mariacutea Manrique hija del Marqueacutes de Aguilar y Dontildea Catalina de la Cerda hija del segundo Duque de Medinaceli (Romero 2)

Existen noticias concretas de la seacuteptima virreina de la Nueva Espantildea (1586) dontildea Blanca de Velasco marquesa de Villamanrique En ellas destaca lo anteriormente men-cionado sobre la falta de tolerancia existente en aquellos tiempos difiacutecilmente com-prensible si no fuera por fragmentos esporaacutedicos conservados sobre la vida colonial en la Nueva Espantildea En la siguiente Relacioacuten hecha por autores anoacutenimos sobre la visita que hizo Fray Alonso Ponce Comisario General de la Orden Seraacutefica a las provincias de la Nueva Espantildea se mencionan las eneacutergicas medidas que con los miembros de su orden en su opinioacuten de moral laquomuy relajadaraquo tomoacute este religioso Tambieacuten aparecen mencionadas sus relaciones con la Virreina

Captoacutese ademaacutes la enemistad del gobernante y de la Virreina Dontildea Blanca de Velasco hija del cuarto Conde de Nieva sentildeora seguacuten pare-ce de conducta ligera y caraacutecter maacutes que dominante laquoPor este mismo tiempo (septiembre de 1586) fueron el Virey y la Vireyna a holgarse y recrearse en la cibdad de Xochimilco Posoacute con toda su casa dentro de nuestro convento en un dormitorio deacutel y detuacutevose alliacute siete u ocho diacuteas en que los indios les hicieron grandes fiestas aunque les costaron caras porque en una dellas murieron dos o tres dellos con un tiro que se disparoacute y reventoacute y al principal indio de aquella cibdad hirieron muy malraquo (Romero 3-4)

A pesar del riacutegido control eclesiaacutestico y civil que habiacutea en la Nueva Espantildea existieron tambieacuten pareacutentesis en los que incluso miembros de la iglesia y mujeres mdashhumanos al fin y al cabomdash pudieron disfrutar de algunos momentos de regocijo y alegriacutea Con-tinuando con la cita anterior el mismo autor se queja del laquoexcesoraquo de libertad en los frailes que se suponiacutea que teniacutean que profesar una extremada pobreza y no digamos castidad En primer lugar se describen pormenorizadamente la abundancia en el tipo y cantidad de comida de toda clase dulces y vino que se consumieron con largueza y generosidad durante aquellas fiestas Pero lo que maacutes indigna al autor (o autores) fue que llegasen a entrar mujeres en el convento

y aunque todo esto es malo delante de Dios y delante de los hom-bres lo que maacutes mal parecioacute y de que todo el mundo tuvo que mur-murar fueacute la demasiada libertad rotura y disolucioacuten que hubo en en-trar y estar muy de propoacutesito mujeres no soacutelo la Vireyna y las suyas sino otras muchas dentro del dicho convento y andar por las celdas como si fuese cosa profana y como si no hubiera breve apostoacutelico que soacute graves penas y censuras prohibe estas entradas y como si a los frai-les no los comprendiera el dicho breve por admitirlas y no estuviera asiacute declarado y mandado por nuestros estatutos generales de Toledo (Romero 4-5)

La preocupacioacuten por las laquotentaciones de la carneraquo fuera del matrimonio siempre es-tuvo en la mente de los religiosos espantildeoles asiacute como de otras nacionalidades y reli-

160 JUAN FRANCISCO MAURA

giones que intentaban vanamente erradicar algo tan intriacutenseco al ser humano como a cualquier otra especie animal Esta preocupacioacuten se acentuoacute mucho maacutes en el Nuevo Mundo donde muchas sociedades tribales no veiacutean a la mujer como parte integrante de su propiedad privada La razoacuten es obviamente socioloacutegica y ha existido desde el principio de los tiempos en las civilizaciones maacutes primitivas laquoNo desearaacutes a la mujer del proacutejimoraquo El quebrantar este precepto equivaldriacutea a desestabilizar desde su base a la sociedad judeo-cristiana fundamentada en la familia Las penas aplicadas en estas transgresiones seraacuten lo suficientemente severas como para marginar socialmente mdashen el mejor de los casosmdash a aquellos que las pongan en praacutectica Siendo la mujer la encar-gada por la naturaleza de trasmitir la descendencia de la especie su libertad sexual se veraacute limitada por el peligro de quedar embarazada cada vez que ignore tal elemental precepto140

Primeras escritoras del Nuevo Mundo

Contra cuerdos y contra locos estaacute obligado cualquier caballero andante a volver por la honra de las mujeres cualesquiera que sean Cuanto maacutes por las reinas de tan alta guisa y pro como fue la reina Madaacutesima a quien yo tengo particular aficioacuten por sus buenas partes porque fuera de haber sido fermosa ademaacutes fue muy prudente y muy sufrida en sus calamidades que las tuvo muchas (Cervantes Don Quijote)

Fueron varias las escritoras que durante los siglos XVI y XVII tuvieron una relacioacuten di-recta o indirecta con el Nuevo Mundo Muchas de ellas eligieron la vida monaacutestica mdashen algunos casos como refugio huyendo de sus maridosmdash uacutenica salida en una estructura social en donde no eran muchas las opciones especialmente en una eacutepoca donde el fac-tor religioso pesaba casi tanto como el econoacutemico pero sobre todo para dedicarse a una vida espiritual difiacutecilmente alcanzable en otras circunstancias Mariloacute Vigil apunta que las monjas que lo eran por su propia voluntad ademaacutes de tener inquietudes religiosas tambieacuten las teniacutean intelectuales como es el caso de la escritora miacutestica espantildeola Santa Teresa de Jesuacutes (1515-1582) que ademaacutes de tener una de las vidas maacutes interesantes que se conozcan supo sacar tiempo para escribir las maacutes bellas manifestaciones de la poesiacutea liacuterica y sobre todo de la prosa castellana (Vigil 237-38) Cada una de estas mujeres de-dicadas a la vida literaria y espiritual de su tiempo se merece muchiacutesimo maacutes espacio del que se les pueda ofrecer en estas pocas liacuteneas No obstante con estas pasajeras men-

140 Aunque afortunadamente las cosas han cambiado para la mujer no se debe dejar de mencionar la can-tidad de abusos sexuales de la que es viacutectima en la sociedad moderna

161ESPANtildeOLAS DE ULTRAMAR EN LA HISTORIA Y EN LA LITERATURA

ciones se espera al menos incluirlas y poder despertar el suficiente intereacutes para que sus vidas y sus obras no sigan sumergidas en las simas del olvido Para que estas mujeres de la iglesia pudiesen satisfacer su curiosidad cognoscitiva era necesario romper todas aquellas barreras que supusiesen un estorbo o una restriccioacuten a la hora de investigar consultar o hablar con cualquier persona religiosa de cualquier orden o secular ya fue-se obispo o cleacuterigo Las posiciones intelectuales entre las diferentes oacuterdenes religiosas fueron muy dispares como bien es sabido No eran iguales los planteamientos teoloacute-gicos de los dominicos que los de los franciscanos o los de los carmelitas que los de los agustinos o jesuitas Era necesario por lo tanto tener acceso a estas fuentes de informa-cioacuten para poder constrastar las diferencias y hacer valoraciones propias (Vigil 237-38) El escritor espantildeol Caro Baroja destaca el caraacutecter enciclopeacutedico del catolicismo donde se han integrado corrientes y posturas muy dispares que a traveacutes del diaacutelogo daban cierto espacio al creyente con maacutes curiosidad intelectual para que este pudiese compa-rar y valorar las diferentes opciones que se le ofreciacutean (Vigil 237-38)

Varias de estas mujeres intelectuales fueron hijas de conquistadores que aunque na-cidas en suelo americano seguiacutean expresaacutendose en la lengua de sus padres con no me-nos fuerza que sus contemporaacuteneas peninsulares Es cierto que existieron numerosas escritoras en el Nuevo Mundo durante el siglo XVIII algunas dedicadas incluso al estudio de las matemaacuteticas como la mexicana Dontildea Francisca Gonzaga y Castillo Pero para limitar el presente trabajo a los siglos XVI y XVII uacutenicamente se incluiraacuten ejemplos de estos dos siglos

La peruana Josefa de Alarcoacuten publicoacute en 1648 unas liras dedicadas a las Exequias del Priacutencipe Baltasar Carlos

Cifro en capilla breveEl tribunal de la Magestad maacutes graveEn fe de lo que debeA Carlos que en dos mundos no cabe141

El caso de Sor Jeroacutenima de la Asuncioacuten es muy interesante una mujer que tuvo la oportunidad de viajar a Meacutexico y posteriormente a las Filipinas para cumplir con las mi-siones que le habiacutean sido encomendadas por su orden Nacida en Toledo en 1555 en el seno de una noble y acaudalada familia estuvo destinada a recorrer el mundo ofrecien-do sus servicios a todos los necesitados distinguieacutendose por su ardiente caridad laquovien-do que los galeotes eran tratados con dureza excesiva sobre todo cuando los llevaban de un pueblo a otro procuroacute aliviar las penas de aquellos desgraciados y lo consiguioacute en parteraquo (Serrano y Sanz 268 65) Hija del licenciado e ilustre jurista Pedro Garciacutea Yaacute-ntildeez y de dontildea Catalina de la Fuente ingresoacute contra su voluntad en el monasterio de las Clarisas de Santa Isabel de los Reyes (Toledo) el 5 de agosto de 1570 (Trevintildeo 46) hay que decir que eacutesta no seraacute la uacutenica voluntad contra la que tuvo que luchar

Sor Jeroacutenima se embarcoacute para Meacutexico y de alliacute partioacute hacia Manila junto con siete compantildeeras en el famoso laquoGaleoacuten de Manilaraquo que saliacutea anualmente del puerto mexi-cano de Acapulco Su viaje a las Filipinas duroacute un antildeo y tres meses desde su salida de Espantildea tiempo en el que demostroacute un gran valor y determinacioacuten por el soacutelo hecho de

141 Manuel Serrano y Sanz Apuntes para una biblioteca de escritoras espantildeolas desde el antildeo 1401 al 1833 vols 268 269 270 271 Biblioteca de Autores Espantildeoles (Madrid Atlas 1975) 268 19

162 JUAN FRANCISCO MAURA

embarcarse en tan precarias naves Fue la primera misionera de Oceaniacutea muriendo en Manila en 1621 Alliacute fundoacute el monasterio de Santa Clara que perviviriacutea hasta ser bom-bardeado en la Segunda Guerra Mundial (Trevintildeo 47) Escribioacute su Vida donde trata de la fundacioacuten del convento y de todas las tribulaciones mdashllegoacute a ser excomulgadamdash y satisfacciones que una vida dedicada a una causa justa proporciona Tambieacuten escribioacute una obra de caraacutecter filosoacutefico-teoloacutegico titulada Carta de marear en el mar del mundo nombre alegoacuterico que da cuenta de la enorme distancia recorrida a traveacutes del laquomar del espiacuterituraquo por sor Jeroacutenima He aquiacute algunos de sus versos de caraacutecter religioso

Vuestra soy para vos naciacuteiquestQueacute mandaacuteis hacer de miacute Inaccesible grandezaEterna Sabiduriacuteay bondad del alma miacuteaDios un ser poder y Altezamirad la suma pobrezade eacutesta que se ofrece aquiacuteiquestQueacute mandaacuteis hacer de miacute (Serrano y Sanz 268 66)

Ya en Meacutexico tenemos otro ejemplo de una mujer dedicada por completo a Dios y al estudio y composicioacuten de obras de caraacutecter teoloacutegico Dontildea Ana Mariacutea del Costa-do de Cristo nacida en la ciudad de Tlaxcala hacia el antildeo 1650 Tomoacute la orden de San Francisco para consagrarse a las labores de su orden y a la escritura Se dice que con los escritos de Dontildea Ana Mariacutea se podriacutean formar veinte tomos (Serrano y Sanz 268 282) Estas son algunas de sus obras Vida y muerte de Jesucristo Nuestro Sentildeor Vida del Seraacutefico Padre San Francisco de Asiacutes Vida de la iacutenclita Virgen Santa Clara Vida del sutiliacutesimo doctor Juan Duns Escoto

Pero no todas las monjas tuvieron vidas tan dedicadas al estudio y la oracioacuten Loacutegica-mente entre un nuacutemero tan grande de mujeres existioacute de todo y seriacutea un error pensar que todos los conventos femeninos estaban integrados por laquocaacutendidas palomasraquo Una monja en el siglo XVI y XVII teniacutea mucha maacutes fuerza que una mujer ordinaria ya que actuaban en grupo y la entrada a los recintos donde viviacutean estaba permitida solo a mu-jeres Esta situacioacuten las haciacutea mucho maacutes fuertes a todos los niveles que una mujer sola protegida uacutenicamente por su familia laquoLas monjas durante los siglos XVI y XVII lucharon por eludir la clausura y por zafarse del control que los frailes de las secciones masculi-nas de sus congregaciones ejerciacutean sobre ellasraquo (Vigil 230) Soacutelo un antildeo maacutes tarde que dontildea Ana Mariacutea del Costado de Cristo en 1651 y a 12 leguas de Meacutexico nacioacute la sin par Sor Juana Ineacutes de la Cruz hija de don Pedro Manuel de Asbaje natural de Vergara (Vizcaya) y de Dontildea Isabel Ramiacuterez de Santillana hija de espantildeoles (Serrano y Sanz 268 289) Por ser sin lugar a dudas la poeta maacutes importante de su tiempo y probable-mente la maacutes conocida del mundo hispano no profundizaremos en ella Su obra es un canto a la inteligencia y el exponente maacutes destacado de la literatura barroca americana tanto en prosa como en verso Destacareacute simplemente que Sor Juana Ineacutes pese a vivir en un sociedad donde no eran excesivas las libertades concedidas a las mujeres tuvo el caraacutecter y la determinacioacuten de dejarnos las maacutes bellas poesiacuteas amorosas que si bien estuvieron enmarcadas en un ambiente religioso como era de esperar por su condicioacuten

163ESPANtildeOLAS DE ULTRAMAR EN LA HISTORIA Y EN LA LITERATURA

pudieron transcender como unas de las maacutes bellas manifestaciones literarias que hoy en diacutea se conservan Fue su agudeza mental sensibilidad y cultura tal que no fueron suficientes los soacutelidos muros del convento para contener el genio de tan extraordinaria mujer Recordemos sus conocidiacutesimos versos en defensa de las mujeres

Hombres necios que acusaacuteisa la mujer sin razoacutensin ver que sois la ocasioacutende lo mismo que culpaacuteis142

Las metaacuteforas y la delicadeza que emplea en rebatir a su obispo en su laquoRespuesta a sor Filotea de la Cruzraquo no son solamente el epiacutetome del feminismo de su tiempo sino una de las maacutes brillantes manifestaciones del barroco hispano Poesiacutea teatro ensayo y un conocimiento extraordinario de las ciencias claacutesicas de su tiempo hacen de esta mujer un ejemplo extraordinario de las letras universales Ya son cientos los artiacuteculos y libros que se han escrito sobre Sor Juana y no dejan de aparecer tesis doctorales sobre los maacutes diversos temas conectados con la citada autora143 Como nos dice Stephanie Merrim en su documentada obra Early Modern Womenrsquos Writing and Sor Juana Ineacutes de la Cruz

She wrote and published on secular themes as atypical for a nun as human love Her remarkably extensive writings essayed and reenacted most of the (male) poetic dramatic theological and even philosophi-cal discourses of her times in the metropolis making her works a com-pendium of baroque culture in its diversity and syncretism Sor Juana self-creation as a learned women effectively toppled many of the walls in which she was materially enclosed and positioned her within the dynamic world of early modern European culture (xii)

No se debe dejar de mencionar a otras escritoras novohispanas de la eacutepoca que aun-que no fueron tan proliacuteficas y relevantes como Juana Ineacutes de la Cruz dejaron testimo-nio de algunos acontecimientos que tienen intereacutes socioloacutegico o testimonial Este es el caso de Dontildea Mariacutea Estrada Medinilla de igual nombre y apellido que la mujer que acompantildeoacute a las tropas de Corteacutes en su primera entrada a Meacutexico Natural de Meacutexico publicoacute toda su obra a mediados del siglo XVII concentraacutendose principalmente en la lle-gada del Marqueacutes de Villena virrey y capitaacuten general de la Nueva Espantildea a la ciudad de Meacutexico en el antildeo 1640 Escrita en octavas reales la obra trata de las fiestas de toros y cantildeas con que se obsequioacute al citado virrey Fue impresa en Meacutexico en 1641 (Serrano y Sanz 269 402)

Mucho maacutes importante para el presente libro es Dontildea Isabel de Guevara que escribioacute en 1556 la carta en que se expone la ayuda que ofrecieron las mujeres en el descubri-miento y conquista del Riacuteo de la Plata No cabe la menor duda de que esta carta es uno

142 Para una mejor comprensioacuten del caraacutecter de esta excepcional mujer veacutease entre los numeros trabajos publicados Fredo Arias de la Canal Intento de psicoanaacutelisis de Juana Ineacutes y otros ensayos sorjuanistas (Meacutexico Frente de Afirmacioacuten Hispanista 1972) 47

143 Veacuteanse entre otros trabajos Octavio Paz Sor Juana Ineacutes de la Cruz o las trampas de la fe Georgina Sabat de Rivers En busca de Sor Juana Margo Glantz Sor Juana la comparacioacuten y la hipeacuterbole Gerard C Flynn Sor Juana Ineacutes de la Cruz Stephanie Merrim Feminist perspectives on Sor Juana Ineacutes de la Cruz Pamela Kirk Sor Juana Ineacutes de la Cruz religion art and feminism

164 JUAN FRANCISCO MAURA

de los documentos maacutes importantes con que contamos en relacioacuten a la aportacioacuten fe-menina en el proceso de la conquista de Ameacuterica Su importancia viene dada por varios factores Primero es uno de los primeros testimonios mdashsi no el primeromdash en donde se expone abiertamente la indispensable colaboracioacuten de las mujeres en el descubrimien-to y conquista de tierras en el Nuevo Mundo laquoQue si no fuera por ellas todos fueran acabadosraquo En segundo lugar la informacioacuten vertida en estas liacuteneas presenta en parte la manera de pensar de una mujer espantildeola en tales circunstancias Extraordinario tes-timonio de primera mano que nos da una idea de lo que significoacute en muchos casos el valor y entrega constantes de muchas de estas mujeres que auacuten a riesgo de perder sus vidas no dudaron en luchar al lado de los hombres por una causa que consideraban laquocomuacutenraquo

La relevancia histoacuterica de dicha carta hace que merezca ser transcrita en su totali-dad

Carta de dontildea Isabel de Guevara a la princesa gobernadora dontildea Juana exponiendo los trabajos hechos en el descubrimiento y conquista del Riacuteo de la Plata por las mujeres para ayudar a los hombres y pidiendo repartimiento

para su marido Asuncioacuten 2 de julio de 1556

Muy alta y muy poderosa sentildeora

A esta provincia del Riacuteo de la Plata con el primer gobernador de ella don Pedro de Mendoza hemos venido ciertas mujeres entre las cuales ha querido mi ventura que fuese yo la una y como la armada llegase al puerto de Buenos Aires con mil quinientos hombres y les faltase el bastimento fue tamantildea el hambre que a cabo de tres meses murie-ran los mil esta hambre fue tamantildea que ni la de Jerusalem se le puede igualar ni con otra ninguna se puede comparar Vinieron los hombres en tanta flaqueza que todos los trabajos cargaban de las pobres mu-jeres asiacute en lavarles las ropas como en curarles hacerles de comer lo poco que teniacutean limpiarlos hacer centinela rondar los fuegos armar las ballestas cuando algunas veces los indios les veniacutean a dar guerra hasta cometer a poner fuego en los versos y a levantar los soldados los que estaban para ello dar arma por el campo a voces sargentean-do y poniendo en orden los soldados porque en este tiempo como las mujeres nos sustentamos con poca comida no habiacuteamos caiacutedo en tanta flaqueza como los hombres Bien creeraacute V A que fue tanta la so-licitud que tuvieron que si no fuera por ellas todos fueran acabados y si no fuera por la honra de los hombres muchas maacutes cosas escribiera con verdad y los diera a ellos por testigos Esta relacioacuten bien creo que la escribiraacuten a V A maacutes largamente y por eso cesareacute Pasada esta tan peligrosa turbunada determinaron subir el riacuteo arriba asiacute flacos como estaban y en entrada de invierno en dos bergantines los pocos que quedaron vivos y las fatigadas mujeres los curaban y los miraban y les guisaban la comida trayendo la lentildea a cuestas fuera del naviacuteo y animaacutendolos con palabras varoniles que no se dejasen morir que presto dariacutean en tierra de comida metieacutendolos a cuestas en los

165ESPANtildeOLAS DE ULTRAMAR EN LA HISTORIA Y EN LA LITERATURA

bergantines con tanto amor como si fueran sus propios hijos Y como llegamos a una generacioacuten de indios que se llaman tinbues sentildeores de mucho pescado de nuevo los serviacuteamos en buscarles diversos modos de guisados porque no les diese en rostro el pescado a causa de que lo comiacutean sin pan y estaban muy flacos Despueacutes determinaron subir el Paranaacute arriba en demanda de bastimento en el cual viaje pasaron tanto trabajo las desdichadas mujeres milagrosamente quiso Dios que viviesen por ver que en ellas estaba la vida de ellos porque todos los servicios del naviacuteo los tomaban ellas tan a pechos que se teniacutea por afrentada la que menos haciacutea que otra sirviendo de marear la vela y gobernar el naviacuteo y sondar de proa y tomar el remo al soldado que no podiacutea bogar y escotar144 el naviacuteo y poniendo por delante a los soldados que no se desanimasen que para los hombres eran los trabajos verdad es que a estas cosas ellas no eran apremiadas ni las haciacutean de obliga-cioacuten ni las obligaba si solamente la caridad Asiacute llegaron a esta ciudad de la Asuncioacuten que aunque ahora estaacute muy feacutertil de bastimentos en-tonces estaba de ellos muy necesitada que fue necesario que las muje-res volviesen de nuevo a sus trabajos haciendo rosas con sus propias manos rosando y carpiendo y sembrando y recogiendo el bastimento sin ayuda de nadie hasta tanto que los soldados guarecieron de sus fla-quezas y comenzaron a sentildeorear la tierra y adquirir indios e indias de su servicio hasta ponerse en el estado en que ahora estaacute la tierra He querido escribir y traer a la memoria de V A para hacerle saber la ingratitud que conmigo se ha usado en esta tierra porque al presente se repartioacute por la mayor parte de los que hay en ella asiacute de los anti-guos como de los modernos sin que de miacute y de mis trabajos se tuviese ninguna memoria y me dejaron de fuera sin me dar indio ni ninguacuten geacutenero de servicio Mucho me quisiera hallar libre para me ir a presen-tar delante de VA con los servicios que a SM he hecho y los agravios que ahora se me hacen mas no estaacute en mi mano porque estoy casada con un caballero de Sevilla que se llama Pedro de Esquivel que por servir a SM ha sido causa que mis trabajos quedasen tan olvidados y se me renovasen de nuevo porque tres veces le saqueacute el cuchillo de la garganta como allaacute VA sabraacute A que suplico mande me sea dado mi repartimiento perpetuo y en gratificacioacuten de mis servicios [en el origi-nal del AHN Diversos doc 141 dice ademaacutes mande que sea proveydo mi marido de alguacuten cargo conforme a la calidad de su persona pues el de su parte por sus servicios lo merece] lo merece Nuestro sentildeor acre-ciente su Real vida y estado por muy largos antildeos De esta ciudad de la Asuncioacuten y de julio 2 1556 antildeosServidora de V A que sus Reales manos besa

Dontildea Isabel Guevara

144 Sacar agua de un riacuteo acequia o presa

166 JUAN FRANCISCO MAURA

Sobremdash A la muy alta y muy poderosa sentildeora Princesa dontildea Joana Gobernadora de los reinos de Espantildea etc ndash En su Consejo de Indias (Isabel de Guevara 619-21)

Iroacutenicamente la carta teniacutea que llegar a manos de la desdichada heredera del trono de Castilla e hija de los Reyes Catoacutelicos Juana laquola Locaraquo que habiacutea muerto el antildeo an-terior Son profeacuteticas las palabras de esta mujer no soacutelo porque sus hechos personales quedasen en el olvido sino porque incluso se ha borrado la historia de las mujeres en el Nuevo Mundo negando su presencia Por lo menos Isabel Guevara tuvo acceso a una pluma iquestCuaacutentas seriacutean las que ni siquiera sabriacutean escribir

Otra contemporaacutenea fue dontildea Leonor de Iciz que vivioacute durante la segunda mitad del siglo XVI Interesa sobre todo por los sonetos que escribioacute en elogio de Ercilla soldado que participoacute en la conquista de Chile y que se inmortalizoacute con su obra La Araucana (Serrano y Sanz 269 534) Lo mismo hizo Dontildea Bernarda Lintildeaacuten en 1610 autora de otro soneto en memoria del capitaacuten Gaspar Peacuterez de Villagraacute que participoacute en la conquista de Nuevo Meacutexico (Serrano y Sanz 270 14) Los escritos de estas mujeres tratan de de dos de las eacutepicas maacutes dramaacuteticas de la conquista

En el Peruacute y en pleno siglo XVII aparece otra fundadora de conventos Sor Bernardina de Jesuacutes que ademaacutes fue comparada con Santa Teresa por la semejanza de sus laquocartasraquo con las de la santa de Avila Fue fundadora del convento de Tacunga en Quito maacutes tarde destruiacutedo por un terremoto Dice Serrano y Sanz con respecto a su biografiacutea un tanto legendaria que fue carmelita descalza de Lima y hermana de Dontildea Mariacutea Benavides y Esquivel abuela de D Pedro de Peralta Barnuevo (Serrano y Sanz 269 553) Dicen que esta santa se alimentoacute durante treinta antildeos con laquochochos y caacutescaras de naranja hecho tan raro como increiacuteble Cuando fallecioacute reparaban las monjas en ponerle una vara de azucenas porque habiacutea sido casada y aquellas flores aparecieron milagrosamente sobre el cadaacuteverraquo (Serrano y Sanz 269 553)

Otra limentildea del primer cuarto del siglo XVII con reputacioacuten de santa fue Dontildea Luisa Melgarejo En este caso no se trata de una religiosa de oficio sino de la mujer del doctor Juan de Soto La uacutenica diferencia es que dontildea Luisa al parecer teniacutea laquovisiones y reve-lacionesraquo lo que debioacute poner nervioso a maacutes de un miembro del tribunal del laquoSanto Oficioraquo que consideraron sus escritos laquoculpadosraquo De su papel de laquosantaraquo pasa por lo tanto al de laquoposesaraquo o laquoendemoniadaraquo El inquisidor de Lima Gaitaacuten escribioacute un infor-me donde a traveacutes de la opinioacuten puacuteblica y de otras averiguaciones se deciacutea que dontildea Luisa Melgarejo laquomujer santaraquo sabiacutea cuando las almas de los difuntos saliacutean del Purga-torio El diacutea 14 de noviembre de 1623 se decidioacute tomar posesioacuten de todos los cuadernos en los que habiacutea escrito las experiencias de todos sus laquoarrobos suspensiones extasis y revelacionesraquo Estos cuadernos una vez recogidos presentaron toda una serie de al-teraciones borrones adiciones enmiendas incluso diferente letra por lo que despueacutes de haber sido examinados resultaron culpables145 Excelente imaginacioacuten debioacute tener dontildea Luisa Melgarejo la suficiente al parecer para convencer a algunos miembros de la iglesia de que en sus escritos laquohabiacutea algoraquo que mereciacutea la pena Estas cosas ocurriacutean en Lima uno de los centros culturales maacutes importantes de la vida social y poliacutetica en la Ameacuterica espantildeola Lima a comienzos del siglo XVII seguacuten el empadronamiento llevado

145 Serrano y Sanz 270 47 Veacutease J T Medina Historia del tribunal del Santo Oficio de la Inquisicioacuten de Lima (1569-1820) (Santiago Imprenta Gutemberg 1887) Tomo II 34-41

167ESPANtildeOLAS DE ULTRAMAR EN LA HISTORIA Y EN LA LITERATURA

a cabo en 1614 por el marqueacutes de Montesclaros era una ciudad de 25000 habitantes de los que 11000 eran espantildeoles El nuacutemero de religiosos y religiosas llegaba a 1720 (Pittaluga 77)

Se sabe que en la Isla de Santo Domingo durante el siglo XVI nacioacute o al menos resi-dioacute una poeta de ceacutelebre apellido en los aconteceres del Nuevo Mundo Dontildea Elvira de Mendoza de la que se conserva un manuscrito en la Real Academia de la Historia laquoCantares miacuteos que estaacuteis rebeladosraquo Eugenio de Salazar hace un elogio de ella como poeta en un Soneto a la ilustre Poeta y Sentildeora Dontildea Elvira de Mendoza moradora en la ciudad de Santo Domingo (Serrano y Sanz 270 53)

Nacida en Burgos sobre el antildeo 1590 dontildea Luisa de Padilla merece un lugar aparte dentro del grupo de mujeres escritoras de su eacutepoca Por su estilo faacutecil y castizo su no-vedad de pensamientos y su rica erudicioacuten recibioacute el siguiente comentario de Manuel Serrano y Sanz laquoPocas figuras hay en nuestra historia literaria femenil que puedan compararse a esta eminente prosista acaso la maacutes notable de cuantas florecieron en Es-pantildea durante el siglo XVIIraquo (Serrano y Sanz 270 95-96) Este comentario y comparacioacuten deberiacutea ampliarse para que tambieacuten incluyese a laquola historia literaria varonilraquo

Dontildea Luisa fue defensora de la labor que la Inquisicioacuten estaba realizando en la laquolim-piezaraquo de mujeres laquosoldados del demonioraquo que existieron en algunas provincias espa-ntildeolas en aquel tiempo Muchas de las mujeres que combinaban la magia con los po-deres curativos fueron condenadas no solamente por hombres de la Inquisicioacuten sino tambieacuten por mujeres de todas las clases sociales como es el caso de Luisa de Padilla condesa de Aranda En su obra Elogios de la verdad e invectiva contra la mentira preveniacutea contra aquellos que practicaban artes en contra de la religioacuten cristiana La magiacutea negra seguacuten Padilla era la causante de que muriesen casi tantas personas como otras causas naturales habieacutendose descubierto hasta seis mil brujas en Vizcaya y Guipuzcua con-fesando una mujer de un pueblo pequentildeo haber matado con su laquomagiaraquo a ochocientas personas (Perry 31) Eran estos laquomales de ojoraquo y maldiciones seguacuten la autora las causas de que se secasen los pechos de las madres lactantes que se separasen las parejas casa-das y que abortasen las embarazadas (Perry 31)

Si se tiene en cuenta que dontildea Luisa estuvo emparentada con la maacutes rancia aristocra-cia de su tiempo o lo que es lo mismo con algunos de aquellos que en cierta manera dirigiacutean los destinos de Espantildea en aquella eacutepoca (Duques de Lerma Duque de Uceda Marqueacutes de Cueacutellar Conde de Santa Gadea Marqueacutes de Belmonte por citar algunos) se comprenderaacute mejor su identificacioacuten con una institucioacuten que en teoriacutea velaba por la salvaguarda de los valores laquoeternosraquo de una Espantildea destinada a ser la campeona del ca-tolicismo durante los siglos XVI y XVII El padre de dontildea Luisa fue don Martiacuten de Padilla y Manrique extraordinario militar que proboacute su valor contra enemigos moriscos ingle-ses holandeses piratas berberiscos y el renegado genoveacutes Muley Faxad Fue veterano de la batalla de Lepanto donde apresoacute a cuatro galeras y acompantildeoacute con su escuadra a la reina Dontildea Margarita de Austria cuando vino de Geacutenova en 1598 laquoHabiacutea obtenido a 24 de julio de 1587 el tiacutetulo de Conde de Santa Gadea y en 1596 el de Capitaacuten General de la Armada del mar Oceacuteanoraquo (Serrano y Sanz 27095-96)

Por otra parte tambieacuten se sabe que dontildea Luisa participoacute directamente y desde tem-prana edad en la praacutectica de algunas actividades intelectuales como la historia y la arqueologiacutea a la vez que dedicaba su tiempo a virtudes cristianas como la caridad y el socorro de los necesitados (Serrano y Sanz 270 97) Resulta mucho maacutes faacutecil compren-

168 JUAN FRANCISCO MAURA

der la postura ideoloacutegica de esta gran mujer si tienen en cuenta ademaacutes de los factores antes mencionados otros tantos de caraacutecter biograacutefico concernientes a su educacioacuten y matrimonio

Otra escritora fue la mexicana dontildea Mariacutea Casilda Pozo natural de Temestla (Meacutexi-co) Nacida en el mes de abril de 1682 dejoacute escrita su biografiacutea en 16 cuadernos el ma-nuscrito original se encuentra en la biblioteca del colegio de San Gregorio de Meacutexico Fue su confesor el jesuiacuteta Domingo Quiroga que fue quieacuten la incitoacute a escribir su obra (Serrano y Sanz 270 137) Sor Juana de San Antonio aparece a principios del siglo XVII formando parte de un grupo de religiosas espantildeolas que fueron a Manila por la ruta de Meacutexico Ademaacutes de distinguirse por sus cualidades personales su obra interesa por ofrecer informacioacuten testimonial y costumbrista acerca de la forma de vestir de chinos y japoneses (Serrano y Sanz 270 225)

Otra monja esta vez ecuatoriana fue Gertrudis de San Ildefonso Nacida en 1652 profesoacute su vocacioacuten en el convento de Santa Cruz de Quito dejando escrita su vida por mandato de su confesor el padre Martiacuten de la Cruz el cual hizo una biografiacutea laquoen tres gruesos voluacutemenesraquo Gertrudis de San Ildefonso murioacute en 1709 (Serrano y Sanz 270 300) en olor de santidad

Sor Mariacutea Ana Agueda de San Ignacio nacioacute el 3 de marzo de 1695 en la dioacutecesis de la puebla de los Angeles en un rancho del lugar de Santiago Tecaliacute (Serrano y Sanz 270300) Esta monja mexicana escribioacute varias obras durante su vida conventual a lo largo de la cual desempentildeoacute el cargo de priora por muchos antildeos Entre sus obras todas de caraacutecter piacuteo y de laquoamor divinoraquo escribioacute un curioso y laquocopiosoraquo tratado de la Leche virginal de la Soberana Madre de Dios El padre Fr Juan de Villa Saacutenchez hace el siguiente comentario al respecto laquoen que hablando primero en sentido natural de los beneficios que debemos a Nuestra Sentildeora pasa a tratar en sentido miacutestico y alegoacuterico enten-diendo en la leche la doctrinaraquo (Serrano y Sanz 270301) Mexicana fue tambieacuten Sor Petronila de San Joseacute que ejercioacute como abadesa del Real monasterio de Jesuacutes Mariacutea de la ciudad de Meacutexico Escribioacute Vidas de varias religiosas ejemplares obra que tiene su im-portancia ya que al parecer laquoDe esta obra se sirvioacute D Carlos de Siguumlenza y Goacutengora para escribir su Parayso Occidental (Meacutexico 1684) seguacuten eacutel mismo declara en el proacutelogo diciendo lsquoa quien si hay algo bueno en esta historia se le debe todorsquoraquo (Serrano y Sanz 270 354) Menos conocida fue su compatriota Sor Luisa de Santa Catalina natural de Xacona laquopueblo situado en las inmediaciones de Zamora (Meacutexico)raquo siendo bautizada en 1682 Escribioacute Cartas espirituales a su confesor el P Juan Loacutepez de Aguado (Serrano y Sanz 270 361-62)146

Todos estos escritos la mayoriacutea de ellos ignorados por el gran puacuteblico tienen la im-portancia de darnos una perspectiva diferente En otras palabras ensentildearnos la maacutes refinada sensibilidad de muchas mujeres que permanecieron y en su mayoriacutea siguen permaneciendo a laquooscurasraquo de una eacutepoca tan rica de la literatura espantildeola como fue el Siglo de Oro Este siglo fue tambieacuten en su dimensioacuten literaria y artiacutestica patrimonio de la mujer

146 Para profundizar en muchas de estas escritoras hispano-americanas la consulta de la Biblioteca Hispano-Americana de Beristain de Souza resulta de capital importancia

169ESPANtildeOLAS DE ULTRAMAR EN LA HISTORIA Y EN LA LITERATURA

Sor Nada ardores divinos de una monja adolescente escritos ineacutedi-tos de una recieacuten profesa del siglo XVI147

iexclQueacute encantadores son tus amores hermana miacutea espo-sa iexclQueacute deliciosos son tus amores maacutes que el vino Y el aroma de tus perfumes es mejor que el de los baacutelsamos Miel virgen destilan tus labios esposa miel y leche hay en tu lengua y el perfume de tus vestidos es como aroma de incienso (Cantar de los Cantares 4 10-11)

Sor Nada llamada asiacute por humildad seguacuten dice el Indice de manuscritos de la Biblio-teca Nacional de Madrid es uno de los ejemplos maacutes desconocidos e interesantes que tenemos de la poesiacutea y prosa amoroso-religiosa del siglo XVII Hasta la fecha nunca se habiacutea publicado su obra e incluso hasta el antildeo 1995 para mi sorpresa no habiacutea copias microfilmadas de sus manuscritos en la Biblioteca Nacional Serrano y Sanz en su libro Apuntes para una Biblioteca de Escritoras Espantildeolas hace una escueta y pasajera mencioacuten de esta mujer y de su obra (68-69) siendo eso todo lo que hasta ahora se sabiacutea de ella Sus escritos consisten en los siguientes manuscritos

1 laquoEn queacute consiste un verdadero amor de Diosraquo 9 hojas uacutetiles en 4ordm letra del siglo XVII Biblioteca Nacional de Espantildea Manuscrito 1295926

2 laquoPintura del Propio Amorraquo laquoPintura del propio Amorraquo 10 hojas uacutetiles en 4ordm letra del siglo XVII Biblioteca Nacional de Espantildea Manuscrito 1295927

3 laquoEsplicacioacuten sobre en queacute consiste la paz del Almaraquo laquoQuartillas aacute un Alma que padece soledad interiorraquo 7 hojas uacutetiles en 4ordm letra del siglo XVII Biblioteca Nacio-nal de Espantildea Manuscrito 1295828

En cuanto a su persona soacutelo se nos dice que laquose encubrioacute con este seudoacutenimo laquoSor Nadaraquo Esta monja desconocida de origen hispanoamericano posee toda la frescura e ingenuidad de una joven apasionada metida por vocacioacuten u obligacioacuten a ejercer la profesioacuten maacutes comuacuten para mujeres de cierta clase social de su tiempo En sus liacuteneas podemos encontrar un misticismo simple incluso en algunos momentos infantil pero a su vez lleno de una fuerza y sensualidad interior poco comuacuten en escritos de este geacute-nero que desborda los liacutemites del laquoamor divinoraquo a traveacutes de los diaacutelogos entre el Alma y el Esposo Sor Nada consigue proyectar su amor a Dios maacutes allaacute de una experiencia romaacutentica Su experiencia es sincera y genuinamente miacutestica trascendiendo la imita-cioacuten o la propia creacioacuten poeacutetica ficcionalizada (Hatzfeld 30) Algunos pasajes son de un

147 Veacutease mi artiacuteculo Sor Nada ardores divinos de una monja adolescente escritos ineacuteditos de una monja profesa del siglo XVIIraquo Espeacuteculo Revista de estudios literarios 26 (2004) 1-10 Universidad Complutense de Madrid http wwwucmesinfoespeculonumero26sornadahtml

170 JUAN FRANCISCO MAURA

alto contenido eroacutetico con sustantivos y metaacuteforas que recuerdan la maacutes iacutentima unioacuten amorosa en unos casos y el tierno amor maternal en otros

[T]e miro Jesus mio desnudo a las inclemencias del tiempo y ardien-do en puro fuego de Amor por la salud de las Almas y me ensentildeas a que te ame con todo mi corason y puresa de espiritu No atendiendo ni buscando umanos intereses ni a solisitar consuelos ni regalos espi-rituales que suelen empantildear la puresa del noble corason No mi Jesus amable pues antes me ensentildeaste tu puro Amor que desnudo sean [sic] de encaminar mis passos desde el pesebre asta la cuna en donde te miro tan desnudo como el pesebre y todo Sentildeor por mi Amor (Mss 12959 26 hoja 1 v)

El manuscrito (12959 27) de la mencionada serie de tres contiene algunas correccio-nes quizaacute hechas por el confesor o quizaacute por ella misma cuando se dirige con excesiva familiaridad y arrebatado fervor a su Amado148 He escogido el manuscrito (12959 Caja 28) en primer lugar por ser el ejemplo maacutes representativo de su poesiacutea y prosa En este manuscrito encontramos de forma maacutes directa que alegoacuterica toda la frescura de un diaacutelogo entre Jesuacutes y el alma que raya como diriacutea Cervantes laquoa la llana y sin rodeosraquo (667 lib 2 cap 38) con el doloroso y a veces desesperado deseo de la entrega y la unioacuten final con el Amado La ortografiacutea no ha sido corregida respetaacutendose el texto ori-ginal149 Veamos el siguiente fragmento

Mira que te amo con Amor de padre y con Amor de esposo el mas fino y puro enamorado que no tan solo me presio de darte mi mano sino tambien todo mi cuerpo y sangre para que con mi pan de vida te sustentes y te regales a tus anchuras y que con mi propio espiritu vivas en paz como tu lo deseas y que mis amores sean unico alivio en tus trabajos en esta mortal vida pues si esto es asi y sabes que muero por darte vida dime esposa mia de que te fatigas Dame querida tus bras-sos y dime si me amas como yo te amo (Hoja 4)

148 La antologiacutea de Promis ha procurado insertar entre los textos antoloacutegicos algunos que se refieren a la es-critura de mujeres fundamentalmente de aquellos generados en el interior de los espacios conventuales Estos textos se fundan como laquohistorias de vidasraquo y responden casi siempre a los requerimientos de los confesores de las monjas coloniales En este sentido resulta valiosiacutesima la incorporacioacuten de la llamada Relacioacuten autobiograacute-fica de Sor Ursula Suaacuterez como una muestra significativa de la escritura monjil entendida en esta eacutepoca (como tambieacuten en la tradicioacuten europea medieval) inserta en las denominadas laquolabores de manoraquo de las religiosas ya que el texto escrito por mandato se convertiacutea en una suerte de entramado o tejido linguumliacutestico es decir en un nuevo bordado que la mayor parte de las veces el confesor convertido en censor iba haciendo tachando y enmendando En la antologiacutea Promis agrega un texto de Sor Tadea Garciacutea de la Huerta titulado Relacioacuten de la inundacioacuten que hizo el riacuteo Mapocho de la ciudad de Santiago de Chile en el monasterio de Carmelitas titular de San Rafael el diacutea 16 de junio de 1783 se trata de un poema tipo romance escrito en versos octosilaacutebicos y que da cuenta de lo sucedido ese diacutea en el convento (Resentildea de la literatura del reino de Chile de Joseacute Promis Eddie Morales Pintildea httpwwwupaclpublicaciones2002literatura_promishtm)

149 Son frecuentes las faltas ortograacuteficas Una de ellas es el uso constante del seseo La ausencia de acentua-cioacuten y puntuacioacuten exceptuando alguacuten punto o coma arbitrario no seguido casi nunca de mayuacutescula inicial lo mismo que el uso igualmente aribitrario de la h o de b v r q g j m n x etc No olvidemos de la misma forma la laxitud linguumliacutestica existente en el siglo XVII (no sabemos a queacute parte de eacuteste pertenece el manuscrito) asiacute como la joven edad de la monja

171ESPANtildeOLAS DE ULTRAMAR EN LA HISTORIA Y EN LA LITERATURA

Los versos del presente manuscrito poseen la misma fuerza que tiene su prosa Con una estructura estroacutefica indefinida estaacuten aparentemente corregidos por alguien que tu-vo la oportunidad de conocer personalmente a la autora Muy probablemente se trate del padre al que hace referencia al principio del primer manuscrito laquoMandame el Pd que le declare en que consiste un verdadero amor a Diosraquo a continuacioacuten continuacutea con su caracteriacutestica humildad laquo[O]bedesere y dire lo q Dios me inspire segun mi rudesa y simplisidadraquo (Mss 12959 26) En cuanto a la fuerza pasional de esta joven observamos con cierta tristeza coacutemo aparece sublimada en sus escritos con toda la enegiacutea de una joven mujer llena de intensidad y vida pero encerrada en los liacutemites de un convento Veamos un ejemplo en donde responde el Alma en los siguientes versos

O mi enamorado Jesus O mi dulse y tierno amanteO alegria de los sielos O dulse Jesus amable

(Toda Sentildeor me derrito toda Sentildeor me desagoy quiero vivir por ti ea sentildeor abrasadme) [Tachado en el original]

Toda Sentildeor me derrito toda Sentildeor me desagoy quiero morir por vos ea Sentildeor que ya acabo

Ya tus amores me llaman ya tus perfumes me traencon suspiros y agonias Sentildeor hasta que te alcanse

O mi Jesus amoroso no puedo mas dilatarmeya la pasiensia me falta dulse Jesus abrasadme

(No puedo vivir sin vos no puedo mas dilatarmeya la pasiensia me falta dulse) [Tachado en el original]

No puedo vivir sin vos mi dulse Jesus amablepues me teneis echisada siendo mi esposo y mi Padre

Ay que me abraso Ay que me quemo del Amor deJesus nasareno como no tocan y tantildeen a fuego150

Estos versos llenos de arrebato sublimado conectan con toda la tradicioacuten miacutestica es-pantildeola que se remonta a Ramoacuten Llul y que culmina en el maacutes universal de nuestros

150 En toda la fuerza y simbologiacutea del amor maacutes iacutentimo del maacutes alto y sublime placer de la unioacuten de los amantes tal como lo encontramos en el Cantar de los Cantares y en San Juan de la Cruz Leemos en la Biblia

Ya me he quitado la tuacutenica iquestCoacutemo volver a vestirme Ya me he lavado los pies iquestCoacutemo volver a ensuciarlosMi amado metioacute su mano por el agujero (de la llave) y mis entrantildeas se estremecieron por eacutel Me levanteacute para abrir a mi amado Mis manos destilaron mirra y mis dedos mirra exquisita en el pestillo de la cerradura (5 3-5)

Nos ocurre lo mismo con San Juan de la Cruz en su insuperable poema laquoLlama de amor vivaraquo

iexclOh cauterio suaveiexclOh regalada llagaiexclOh mano blanda iexclOh toque delicadoque a vida eterna sabey toda deuda pagaMatando muerte en vida la has trocado

172 JUAN FRANCISCO MAURA

miacutesticos San Juan de la Cruz Esta tradicioacuten se extiende hasta finales del siglo XVII esto es hasta los finales del Barroco siendo un poco maacutes tardiacuteo en la Ameacuterica espantildeola Sin tener como propoacutesito discutir en el presente trabajo a queacute corriente miacutestica pertenece la obra de Sor Nada es necesario resaltar no obstante el hecho de que estaacute escrito por una mujer y ademaacutes de tierna edad El manuscrito 12959 Caja 26 termina con estas pa-labras laquo[T]odas estas boverias escrivi por entretenimiento siendo resien profesa en la religion Sor Nadaraquo Mas no por la juventud de su autora los escritos dejan de tener lo-gradas metaacuteforas imaacutegenes y siacutembolos sacados de la naturaleza La alegoriacutea de la unioacuten matrimonial poseeacute el fuego liacuterico de la maacutes apasionada de las relaciones amorosas vivi-ficada por perfumes flores insectos animales escarchas nieves o abrojos Por lo tanto aunque la narracioacuten destile cierta ingenuidad no carece por ello de un vocabulario rico con el sabor popular de la poesiacutea de los cancioneros y romances de tradicioacuten renacen-tista No ha sido otra mi intencioacuten que la de rescatar del olvido unos escritos en prosa y en verso llenos de frescura y espontaneidad que nos muestran la pasioacuten con que la joven novicia se laquoentrega en cuerpo y almaraquo a los menesteres de su profesioacuten guiada por un padre espiritual en esos primeros antildeos de formacioacuten Esta ha sido la razoacuten por la que presento a continuacioacuten el citado manuscrito en su totalidad

Sor Nada (Mss 1295928)

laquoEsplicacion sobre en que consiste la paz del AlmaraquolaquoQuartillas a un Alma que padece soledad interiorraquo

[7 hojas utiles en 4ordm letra del siglo XVII]

+

Esplicacion sobre en que consiste la paz del Alma

Pareseme segun mi rudo entender que la verdadera paz del Alma con-siste en una muy pura y buena consiencia en un corason liso y bien intensionado en una verdadera rectitud de espiritu en el qual el Alma procura bolar a Dios sin jamas detenerse a respetos umanos ni reparar en que me diran ni de que me censuraran sino me apresuro a seguir a unos entenderes y pareseres dorados en los quales pretende el mundo engantildear y ensuciar si se puede la puresa de un corason unicamente de Dios y de su Santa ley y se lo conserva cristalino con la divina asis-tencia de la gracia y comprendido de su Amor y temor siguiendo la luz divina de tan amante Sentildeor Dios y ombre verdadero con que este ilustrado corason ni se altera ni se mueve por los disfrasses dorados que ase el mundo y sus moradores mayormente con falssas amistades aunque con ellos muestre buena intension Con la misma grasia y luz de Dios conose el buen corason estos disfrasses que le ase el mundo y se retira de todo con espiritu y valor esto sin la menor alterasion sino que en suma paz se retira a buscar a Dios dentro de su mismo corason

173ESPANtildeOLAS DE ULTRAMAR EN LA HISTORIA Y EN LA LITERATURA

y se abrasa con su pura verdad en la qual se le descubren mil interio-res secretos tan solidos puros y verdaderos que la misma Alma queda abismada y de puro grandes no los puede bien comprender ni esplicar pero estos mismos secretos divinos le sirven de espuelas para no solo correr sino bolar con pies de plumas en seguimiento de su bien ama-do Jesus y como este soberano Sentildeor es tan amante de sus espossas las Almas luego que la ve bolar con pies de plumas la sale al encuen-tro en despoblado campo que se deve de llamar Campo de Amor de Dios y el mismo Sentildeor se viene a las manos por ser Dios que nos ama con Amor infinito de Padre benigno y amoroso con que asiendose en contra deso este divino enamorado en lo interyor de el Alma que le busca con ansias de servirle y amarle y en aquella soledad traban una conversasion amorosa y sensilla como la pluma simple de quien esto escrive

Divino enquentroDios y el Alma en la soledad

O Soberano Principe de la paz dise el Alma tus perfumes me traen a ti bolando porque alla en el mundo y sus valedores me pretendian engantildear y entretenerme con pegaminossas amistades que facilmen-te me pudieran envenenar y matarme apartandome de ti Mi dulse Jesus amable mi Redentor Soberano que con tantas ansias me sales al enquentro como siervo [ciervo] erido de mis Amores los quales tu Amor me ofrese para que con tu mismo Amor te ame y te sirva en paz sin perturbarme ni contristarme ni cansarme de padeser pasando si se ofrese por escarchas nieves espinas ni abrojos ni por otros diverssos trabajos ni piedras de contradision que tu me puedes permitir pues por mas que el mar se levante con sus ferosses olas contra mi ni piedras se me tiren al rostro en todo Sentildeor me quieres con serenidad pasifica sin la menor perturbasion Todo Sentildeor quieres que lo tome con Serenidad de espiritu y asi vengo a ti bolando para que mejor me ensentildees a vivir segun las leyes de tu noble condision que me son muy agradables por mas que el mundo me las despresie por segir sus vanidades y torsidas intensiones con apariensias de bien y con este engantildeo y bien me quie-ro mas a mi que no a mi proximo veo que segun mi pareser se pierden muchas Almas y tambien de aquellos que se depresian y pasan por muy espirituales Con que me paresen pocos los que llegan a padeser con desnudes151 de espiritu por tu purisimo Amor y me parese essas se quedan muy atrasadas en la virtud por el peligro de bolver muy atras el paso de modo que se pueden despentildear y pereser en su misma desgra-sia ya por soberbia o por otras enfermedades que se les pega al corason y asi lo pasan como siegos ignorantes sin advertir en sus peligros

151 La letra en cursiva es miacutea

174 JUAN FRANCISCO MAURA

este aquerdo Sentildeor y otros que tu verdad me ensentildea me ase venir uyendo de las paredes del mundo y me vengo a ti Dios mio bolando con las dos Alas del Amor y temor que tu mismo Amor me ofrese tan de gracia y tan de grado que no se duentildeo mio con que lo responder a tan soberano beneficio y finesa de tus entrantildeas de Amorvengo Sentildeor y esposo mio unicamente a descansar en ti pues los peli-gros del camino me an puesto en mucho sobresalto temiendo el per-derte y sin ti perderme para siempre por una eternidad sin fin pues deseo amado mio ganarme ganandote a ti y vivir en ti aora en vida y despues eternamente y estos cuidados me traen fatigada molida y cansada y no podre tener alivio y descanso sino viendome entre tus brassos aunque sea estando en cruz pues ese es el fin de mis deseos vivir y morir en ti ablame mi cordero manso y ensentildeame a que ver-daderamente te ame como fiel esposa ea mi caro amigo dame la ma-no pues sabes Amor mio que en mi no ay mano sin tu misma mano y asi mi Dios y Sentildeor mi Principe Soberano con umilde rendimiento y deseos de alcansarte te suplico me des la mano y me consueles en estos mis trabajos Deseo Sentildeor vivir en paz y los malos amores de mi Naturaleza flaca no me dejan detentar y no quieren por mi desgrasia atropellar con las leyes de tu Amor ni quisiera perturbar mi corason quando me veo con un torvellino de olas y contratiempos que a menu-do me suelen sercar pero si tu Sentildeor me das la mano nada temo sino que me aseguro y vivire en paz sin que me fatiguen los contratiempos pues mi mano en la tuya y mi espiritu en el tuyo por mas borrascas que me envistan no seran bastantes para rendir mi voluntad a la suya bien si para pronunsiar un fiat que resuene bien atras en tus oidos y que en medio de mis fatigas me ponga a cantar tus divinas misericor-dias hea Sentildeor ya pretendo serrar mis labios por no desir mas bove-rias y deseo Sentildeor oir tus palabras de vida eterna abla Sentildeor que tu sierva oye con atension y cuydado mira mi Dios que se me ase tarde y espero con prisa deseando saborearme y aprovecharme de los ecos de tu Santa dotrina pues todas tus palabras saben a eterna vida callen pues mis sentidos y potensias y todo se ponga en paz pues mi dulse y soberano Sentildeor no se escusara de ablar me aun que en mudo silensio hea mi gran Prinsipe de la paz ablame que tus puros amores me traen perdida por estos asperos montes y mis cortos pasos no te pueden dar alcanse mirame mi Dios a tus pies postrada como un vil gusano y me-nor ormiga de la tierraabla Jesus y dise a su esposa el Alma querida esposa mia que me pides y por que te muestras tan fatigada y mal sufrida no vives como corde-rita del campo buscando de mis pechos el sustancial pasto mi Amor no te sustenta y mi grasia te promete eterna vida pues dime amada de que te fatigas y te muestras mal sufrida mira que te amo con Amor de padre y con Amor de esposo el mas fino y puro enamorado que no tan solo me presio de darte mi mano sino tambien todo mi cuerpo y

175ESPANtildeOLAS DE ULTRAMAR EN LA HISTORIA Y EN LA LITERATURA

sangre para que con mi pan de vida te sustentes y te regales a tus an-churas y que con mi propio espiritu vivas en paz como tu lo deseas y que mis amores sean unico alivio en tus trabajos en esta mortal vida pues si esto es asi y sabes que muero por darte vida dime esposa mia de que te fatigas Dame querida tus brassos y dime si me amas como yo te amoResponde el Alma152 Tu mi Dios sabes si yo te amo pues de mi solo se que mis deseos y ansias buelan a ti mas no alcanso a saber si te amo como tu de-seas ser amado y como desconfio tanto de mi y de mis prosederes falssos temo Dios mio perderme y perderte y asi Sentildeor pues no desechas mis Amores y te muestras tan fino en amarme te pido me ensentildees a vivir segun las leyes de tu pura verdad y fina condisionhija mia dise Dios la prueva de un verdadero Amor consiste en sufrir callar y padeser por mi unico Amor y en todo seguir mis pasos sin ja-mas retroseder por mas fragoso que se muestre el camino pues nunca seran tantas las espinas las escarchas ni las nieves ni los vientos bo-rrascosos que te se ofrescan pasar por mi Amor como los que mi tierno y desinteresado Amor paso por ti y siempre con mis pies descalssos y asi hija y esposa mia muestrate costante en seguir lo perfecto de mis passos pues mi braso fuerte sera en ti y peleara por ti y te sera el todo en tus nesesidades y mi Amor te convertira en dulse y suave lo amargo y molesto a la condision de la carrne

Responde el Alma

O mi enamorado Jesus O mi dulse y tierno amanteO alegria de los sielos O dulse Jesus amable

(Toda Sentildeor me derrito toda Sentildeor me desagoy quiero vivir por ti ea sentildeor abrasadme) [Tachado en el original]

Toda Sentildeor me derrito toda Sentildeor me desagoy quiero morir por vos ea Sentildeor que ya acabo

Ya tus amores me llaman ya tus perfumes me traencon suspiros y agonias Sentildeor asta que te alcanse

O mi Jesus amoroso no puedo mas dilatarmeya la pasiensia me falta dulse Jesus abrasadme

(No puedo vivir sin vos no puedo mas dilatarmeya la pasiensia me falta dulse) [Tachado en el original]

No puedo vivir sin vos mi dulse Jesus amablepues me teneis echisada siendo mi esposo y mi Padre

152 La aparicioacuten de una mayuacutescula al principio de una oracioacuten es algo totalmente arbitrario en este ma-nuscrito dada la libertad ortograacutefica de la autora Como se puede observar en la mayor parte de las veces no es el caso

176 JUAN FRANCISCO MAURA

Ay que me abraso Ay que me quemo del Amor deJesus nasareno como no tocan y tantildeen a fuego

Responde Jesus Hija mia tus simples vozes oygo y aunque resuenan bien a mis oidos pero te deseo mas mansa y pasifica en tus fervores ya sabes que no siempre as de vivir en mantillas ni a los pechos de tu Madre por que es rason que padescas con espiritu fuerte como mu-jer valerosa por que a una esposa del Rey soberano y prinsipe de la paz no le estan bien chiquerias ni fervores de nintildea malcriada y ya es ora que la destete su Madre la Naturaleza y que empesando su nueva vida camine con el favor de mi grasia sigiendo mis passos de eterna vida esto con sus pies descalssos segun mis leyes de Amor puro y desinteresado lo tienen ordenado153 y vivir en paz como lo deje en-cargado a mis apostoles Santos repitiendoles varias vezes Vivir en pas y caridad esto es un vivir en Dios y Dios en el Alma y asi hija mia el Alma que vive en paz vive en mi Como mis cortesanos en el cielo y pues me pides que te ensentildee a vivir segun las leyes de mi condision Repito el desir que te debes mostrar sufrida en todo tiempo y estado sin permitir en tu corason que ni aun los fervores se adelanten con estremos ni ademanes sino atiende y aprende de mi purisima Madre pues siempre la veras si bien lo consideras que mientras vivio en el mundo en todos sus trabajos se mostro firme fuerte costante como piedra diamante Pues mirandome nintildeo entre sus brasos desnudo en el pesebre desnudo y crusificado en los brassos de una cruz En estos y otros passos no se mudo su rostro sino que en suma serenidad y pasifico corason toda se sacrificaba enteramente en los brassos de mi Amor y rendido su corason y voluntad en la de mi eterno Padre por ejemplo te la doy y deseo que aprendas de sus nobles calidades pues te aseguro carisima que las leyes de mi condision y pura verdad todo lo allaras enserrado en el corason de mi purisima Madre sedle fiel y descansaras en paz

+

Quartillas a un alma que padese soledad interior

1Un Alma afligida y tristese ve en un campo desiertay en el su esposo la tieneAtormentada y sedienta

153 Es a traveacutes de estas liacuteneas lo que hace suponer que la autora de este diaacutelogo amoroso entre el Alma y Je-suacutes es novicia esto es laquoque estaacute empesando su nueva vidaraquo En las mismas liacuteneas una vez maacutes se hace alusioacuten al laquodesteteraquo de su vida civil laquoa una esposa del Rey soberano y principe de la paz no le estan bien chiquerias ni fervores de nintildea malcriada y ya es ora que la destete su Madre la naturalesaraquo (fol 5)

177ESPANtildeOLAS DE ULTRAMAR EN LA HISTORIA Y EN LA LITERATURA

2Pendiente se ve en el AyreSolo un hilo la sustentasin tocar el pie en el sueloporque del no tome tierra

3Mirandola esta yto a ytoaquel sol que la atraviesay la enviste con sus rayosmas ella no pestantildeea

4Como sigarra padese y como a tal se atormentabatiendo sus mismas Alasy el corason se atraviesa

5Con penas sustos temoresquando se mira assi mesmasin tener valor en nadaporque es la misma flaquesa

6Pero el Amor de su esposotoda su atension le llevay la pone en un abismopero cubierto en tiniebla

7Desea dar algun bueloy subir con ligeresapero se mira travadacon una fuerte cadena

8Clama suspira y padeseMas del todo se sujetaRindiendo su voluntadA la divina clemencia

9Los enemigos del AlmaCruelmente le asen guerray ella aunque firme y constantelos reselos la atormentan

178 JUAN FRANCISCO MAURA

10de todos modos padeseaunque gosa la asistensiadel divino esposo amadoque en su interior se recrea

11Solo de verla penary con verla tan serenadise resibe mil gustosde su sigarra pequentildea

12Le sabe el mundo a mil yelesy su trato le atormentaviendo en el mil falsedadesque todas saben a tierra

13Para poderse librardeja de correr y buelacon las Alas del Amory el mismo Amor se la lleva

Una vida dedicada a un amor divino un amor que le haraacute llenar un buen nuacutemero de cuartillas dedicadas a tan alta empresa Se desconoce si la vocacioacuten de Sor Nada con-tinuoacute con tanta intensidad el resto de sus diacuteas Ciertamente la vida en el covento no era faacutecil En algunos casos la experiencia era traumaacutetica incluso fatal para algunas de las adolescentes de la Ameacuterica Espantildeola Las reglas del claustro eran severas por varias razones Estas joacutevenes si no teniacutean el permiso de la superiora no podiacutean recibir visitas no podiacutean volver a sus casas su correspondencia era censuraba y no podiacutean salir del periacutemetro conventual Igualmente se levantaban antes del amanecer para oir misa tra-bajaban el resto del diacutea y lo maacutes interesante es que muchas veces esta vida era aceptada por muchas

Page 22: Tercera parte: Mujeres en la vida intelectual - …parnaseo.uv.es/Editorial/Maura/TerceraParte.pdf · La Biblia, por su parte, hace repetidas menciones de la mujer y sobre el comporta-

152 JUAN FRANCISCO MAURA

veiacutean venir de su propia tierra aquello que maacutes antildeoraban amantes madres hermanas Un haacutelito de vida y poesiacutea que suavizaba las costumbres de estos rudos y romaacutenticos pioneros laquoporque para ser hombres de tales empresas algo de romaacutentico debioacute de existir en ellos y que es tan propio del espantildeol y abandonariacutean en brazos tan gentiles sus bruscos modales que habiacutean adquirido en aacutespero contacto en selvas y montantildeasraquo (Villafantildee 125)

Hoy sabemos que en la normativa oficial de la Espantildea del siglo XVI y XVII se favoreciacutea el paso de mujeres al Nuevo Mundo Afirmar lo contrario no solamente es falso sino que implica un desconocimiento total de los primeros dos siglos de la colonizacioacuten espantildeola La presencia de estas mujeres espantildeolas fue efectiva laquolas disposiciones al respecto demuestran claramente que se teniacutea especial intereacutes en su arraigo y que se tra-taba de defender su posicioacuten de mujeres casadas con conquistadores y colonizadoresraquo (Villafantildee 126) Los monarcas comprendiacutean que era praacutecticamente imposible que los hombres viviesen sin mujeres y que de ser asiacute era de esperar que se cometiesen abusos con las indias lo que incidiriacutea en la moral social y en el buen gobierno de la colonia Ademaacutes sin un asentamiento definitivo con hogares y familias difiacutecilmente se podriacutea llevar a cabo una presencia permanente en las nuevas colonias (Orsquo Sullivan-Beare 45)

Empezando por los Reyes Catoacutelicos la preocupacioacuten de que en las colonias se esta-bleciesen nuacutecleos que tuviesen como base la familia cristiana fue clara Las capitulacio-nes que a este efecto se hicieron entre los conquistadores y la Corona fueron nume-rosas La efectuada entre Rodrigo de Baacutestidas y Carlos V puede ser un buen ejemplo Fechada en Valladolid el 6 de noviembre de 1524 muestra el propoacutesito de Baacutestidas de establecer una colonia permanente en la desembocadura del riacuteo Magdalena en el terri-torio que hoy vendriacutea a corresponder a Colombia El documento firmado por el Empe-rador comienza asiacute

El Rey Por cuanto por parte de vos Rodrigo de Baacutestidas vecino de la ciudad de Santo Domingo de la Isla Espantildeola Me fueacute fecha relacioacuten que por servicio de la Catholica Reyna Mi Sentildeora e Nuestro os ofre-ceacuteis de poblar e poblariades la provincia e puerto de Santa Marta que en Castilla de Oro llamada la Tierra Firme e que la poblariades dentro de dos antildeos siguientes haciendo en ella un pueblo en que no menos haya en eacutel al presente cincuenta vezinos que los quince de ellos sean casados y tengan consigo a sus mujeres y que lo teniades fecho dentro de dos antildeos y de hoy en adelante lo maacutes que fuese posible asiacute de cris-tianos espantildeoles como de indios (Restrepo 1 30)

De igual manera el priacutencipe Felipe (futuro Felipe II) en las capitulaciones establecidas en 1547 con Juan de Sanabria para que eacuteste fuese como gobernador y capitaacuten general de la dicha provincia escribe lo siguiente laquoPrimeramente que seais obligado e os obligeis a llevar destos Reynos de Castilla a la dicha provincia del Rio de la Plata cien casados con sus mujeres e hijos para poblar la dicha provincia y con ellos llevareis a vuestra muger e hijos (CDI de Ameacuterica y Oceaniacutea 23 119)

En numerosas ocasiones se pone de manifiesto el apoyo de la monarquiacutea a la emigra-cioacuten femenina tantas que difiacutecilmente se podriacutean enumerar todos los casos Lo cierto es que la legislatura vigente favoreciacutea la emigracioacuten y traslado de mujeres con toda una se-

153ESPANtildeOLAS DE ULTRAMAR EN LA HISTORIA Y EN LA LITERATURA

rie de alicientes137 sobre todo si eacutestas estaban casadas pasaje para llevar a las familias franquicia de derecho para los artiacuteculos que portasen consigo favoritismo en cargos destinos y contrataciones a aquellos que pasasen con sus mujeres incluyendo ademaacutes de los castellanos y leoneses a suacutebditos de otras partes de la corona incluso genoveses y portugueses si estos veniacutean acompantildeados de sus consortes (Fernaacutendez Duro 15-16)

Incluso se llegoacute a imponer penas a aquellos hombres casados que no llevasen a sus mujeres con ellos a Indias en el teacutermino de un antildeo El mismo emperador en una ceacutedula otorgada al virrey de la Nueva Espantildea le recomendaba que laquoprocurase persuadir a ca-sarse a los solteros que estuviesen en edad y situacioacuten de hacerloraquo prometieacutendoles que al efectuar el matrimonio seriacutean preferidos en el reparto de indios En la isla de San Juan de Puerto Rico los cargos oficiales y oficios puacuteblicos debiacutean de ser desempentildeados por los casados en primer lugar En Meacutexico ocurrioacute lo mismo con los cargos de corregido-res (Konetzke laquoemigracioacutenraquo 140-41) Felipe II al igual que sus antecesores y sucesores reiteraraacute y justificaraacute los beneficios de los que seraacuten acreedores aquellos que tengan allaacute a sus mujeres laquoque los que han servido en los descubrimientos de las dichas Indias y tambieacuten los que ayudan a la poblacioacuten dellas que tienen allaacute sus mugeres sean preferi-dos en los aprouechamientos qualesquierraquo mandando que despueacutes de los conquistado-res se tuviera en cuenta para la laquoprovisioacuten de los corregimientosraquo a los colonos casados siempre que estuvieran capacitados para dichos cargos (Konetzke laquoemigracioacutenraquo 141)

Las disposiciones en favor del matrimonio son claras ya sea por medio de un favo-ritismo manifiesto como en los casos antes citados o mediante medidas de cohercioacuten para que esta poliacutetica se llevase a cabo Don Sebastiaacuten Ramiacuterez de Fuenleal obispo de Santo Domingo y presidente de la Audiencia de Meacutexico propuso que a aquellos enco-menderos que no estuviesen casados y que no hubiesen tomado parte en la conquista se les quitase los indios concedidos con la obligacioacuten de devolveacuterselos si en el plazo de un antildeo habiacutean contraiacutedo matrimonio (Konetzke laquoemigracioacutenraquo 142-43) Por supuesto hubo excepciones a estas reglas En algunos casos ni la mujer teniacutea especial intereacutes en vivir junto con su marido en las Ameacutericas ni el marido queriacutea ir a buscar a su mujer pasado el plazo de un antildeo En el presente documento y de forma excepcional las auto-ridades reales protegen a los conyuges para que puedan seguir viviendo separados en continentes diferentes

Nuestras justicias de la ysla de Cubagua e otras qualesquier de las nuestras Yndias yslas e tierra firme del mar oceacuteano e a cada uno e qualquier de vos a quieacuten esta mi ceacutedula fuese mostrada por parte de Alonso de Tapia nuestro veedor de la provincia de Paria me ha sido hecha relacioacuten que ha mucho tiempo que reside en esas partes donde nos ha servido en lo que se ha ofrecido e que agora vos otros le apre-miaacuteis a que venga o embiacutee a estos Reinos por su muger lo cual no puede al presente hazer a causa de no ter posibilidad para ello a mi me ha suplicado vos mandase que no le compeliacuteesedes ny apremiaacutesedes a que viniese o enviase por la dicha su muger y dieacutesedes por libres los fiadores que tenyades para que dentro de un antildeo embiariacutea o verniacutea por

137 Reales Ceacutedulas de los antildeos 1502 y 1503 Academia de la Historia Coleccioacuten Muntildeoz tomo 75 fols 209 y 220 citado por Fernaacutendez Duro 15

154 JUAN FRANCISCO MAURA

ella o como la mi merced fuese lo cual visto por los de nuestro consejo juntamente con una peticioacuten presentada por dontildea Mariacutea Gudiel muger del dicho Alonso de Tapia por la cual nos suplica lo mismo que acor-dado que debiacutea mandar esta mi ceacutedula para vos por la qual vos mando que no compelaacuteis ni apremieacuteis al dicho Alonso de Tapia a que venga ni enviacutee a estos reinos por la dicha su muger si no fuere a que la pro-vea de lo que fuere necesario para su mantenimiento y deys por libres quales quier fianzas que sobre ello haya dado e no fagades ende al por alguna manera Firmado en la villa de Valladolid a VII diacuteas del mes de febrero de mil e quinientos e treinta y siete antildeos yo el licenciado Con-de de Samano y sentildealada del cardenal Beltraacuten y Carbajal [Aparte en letra pequentildea] Este diacutea se despachoacute una provisioacuten por la cuaacutel su Mag hizo merced a Alonso de Tapia de la veedoriacutea de la provincia de Paria por muerte de Garciacutea de Aguilar con las clausulas ordinarias y con el mismo salario que teniacutea Aguilar Firmado del emperador y de Beltraacuten y Bernal y Velaacutezquez El Rey (Registro de disposiciones Riacuteo Marantildeoacuten AGI Indiferente General Legajo 416 libro 2 Fols 94v y 95r)

El punto maacutes interesante a destacar de todas estas disposiciones oficiales en cuanto a la emigracioacuten femenina al Nuevo Mundo no es otro que la libertad que se da a la mujer de decidir si quiere o no casada o sin casar trasladarse al nuevo continente no como una imposicioacuten sino como un precepto laquoel espiacuteritu de las disposiciones en el sentido de asegurar la vida marital de los casados significa que la mujer que su marido invita a pa-sar a las Indias puede negarseraquo (Villafantildee 127) Habriacutea que ver las opciones laquorealesraquo ade-maacutes de las legales y econoacutemicas que le quedaban a la mujer si tomaba esta decisioacuten

El saber la libertad de eleccioacuten que estas mujeres teniacutean de antemano antes de aden-trarse en las interminables penalidades y aventuras que los viajes de la navegacioacuten tran-soceaacutenica suponiacutean hace que sus hechos y esfuerzos cobren auacuten maacutes relieve En nume-rosas ocasiones estas mujeres cruzaron el oceacuteano una y maacutes veces sin otro motivo que el de defender los derechos e intereses de los suyos Lo que resulta maacutes valioso de todo esto es que lo hicieran por propia iniciativa arriesgando sus vidas para que se hiciese justicia y para que no les faltase lo necesario a aquellos que estaban en la otra orilla Las autoridades vigentes conocedoras de los vaciacuteos legales existentes en las nuevas colo-nias se apresuraron a poner en vigor aquellas normas que redundaran en el beneficio de los menos favorecidos por las circunstancias La institucioacuten del matrimonio cuya trans-cendencia es fundamental en la vida juriacutedica y social de la mujer tuvo que ser legislada en Ameacuterica con una serie de nuevas disposiciones agregados modificaciones y aclara-ciones Asiacute pues la legislacioacuten de base espantildeola tuvo que sufrir en tierras americanas esta serie de cambios por motivos poliacuteticos y sociales (Villafantildee 126)

Para hacer un sumario de lo dispuesto hasta el siglo XVI en cuanto a la legislacioacuten de las mujeres que teniacutean familia o intereses en Indias merece la pena mencionar que existieron una serie de disposiciones que protegiacutean a las mujeres para que eacutestas no se viesen abandonadas por sus maridos En un epiacutegrafe de la Recopilacioacuten de 1680 (libro VII tiacutetulo 3) se deja ver claramente la preocupacioacuten de las autoridades en este asunto laquoDe los casados en Espantildea e Indias que estaacuten ausentes de sus mujeres y esposasraquo (Vi-llafantildee 126-27)

155ESPANtildeOLAS DE ULTRAMAR EN LA HISTORIA Y EN LA LITERATURA

La lista de disposiciones se hace interminable En los reinados de Fernando el Catoacute-lico Carlos V Felipe II Felipe III o incluso Carlos II la insistencia es constante La ra-zoacuten de esta insistencia seriacutea bastante obvia dado que con un oceacuteano por medio seriacutean muchos los que se aprovechasen de llevar una doble vida marital sin el estricto control y vigilancia de sus mujeres que se encontraban en la peniacutensula La ley XXVII libro IX tiacutetulo XXVI determina laquoDeclaramos por personas prohibidas para embarcarse y pasar a las Indias todos los casados y desposados en estos reinos lsquosino llevaren con ellos sus mujeresrsquo aunque sean virreyes oidores gobernadores o nos fuesen a servir en cual-quier cargo y oficios de Guerra Justicia y Hacienda porque es nuestra voluntad que todos los susodichos lleven a sus mujeresraquo (Villafantildee 127) laquoLos eclesiaacutesticos eran los en-cargados de dar cuenta a los tribunales competentes de aquellos que estando casados permaneciacutean en Indias sin sus mujeres Son reiteradas las disposiciones de Fernando el Catoacutelico en este sentidoraquo138 En 1514 el rey don Fernando ordena en una provisioacuten para la isla Espantildeola laquodoy licencia eacute facultad aacute cualquier persona naturales de estos Reynos para libremente se puedan casar con mujeres naturales de esa dicha ysla sin tener que incurrir por ello en pena algunaraquo (Villafantildee 129)

No se debe olvidar tampoco a aquellas mujeres que decidieron pasar a las laquonuevas tierrasraquo solteras Estas mujeres tambieacuten tuvieron un papel importante en el desarrollo de las nuevas colonias Los organismos espantildeoles del momento como los mandatarios indianos y todos los cronistas no dejaron pasar desapercibida la importancia social de estas mujeres en la poliacutetica de poblamiento laquo[E]s cierto que los pueblos de Indias nuevamente poblados no se tienen por fijos o estables ni permanentes hasta tanto que mujeres espantildeolas entren en ellos y los encomenderos y conquistadores se casen por muchas causas y respetos buenos y saludables que para ello hayraquo (Villafantildee 126-27)

Si la intencioacuten era la de una presencia permanente en las tierras americanas la mujer soltera que pasase a ellas siempre seriacutea un motivo maacutes para el colono o conquistador de continuar en el mismo suelo Se podriacutea empezar una familia si asiacute se quisiese sin tener que pensar en volver a la metroacutepoli ya fuese a disfrutar de los bienes adquiridos o a laquobuscarraquo una esposa El problema aparecioacute cuando se produjo un exceso de mujeres solteras lo que de alguna manera alteroacute la estructura social existente ya que no habiacutea muchas opciones para ellas aparte del matrimonio o el convento

En consideracioacuten a que la experiencia habiacutea demostrado que un exce-sivo nuacutemero de mujeres ejerciacutea perniciosa influencia sobre la moral y las costumbres se suplicaba al rey no otorgase a aquellas tantas auto-rizaciones para emigrar al Peruacute La ciudad de la Plata fundada en 1538 emite en 1577 un informe en el que se expone la urgente necesidad de que se funde un convento de monjas pues en el territorio de las Au-diencias de Los Charcas existiacutea un gran nuacutemero de muchachas que no pudieacutendose casar se hallaban en gran peligro de perderse (Konetzke laquoemigracioacutenraquo 149)

138 Solorzano Pereira Juan de Libro Primero de la Recopilacioacuten de las Ceacutedulas Reales Cartas y Provisiones y Or-denanzas Reales Noticia preliminar de Ricardo Levenne Universidad de Buenos Aires Facultad de Derecho Y Ciencias Sociales Pub del Instituto de Historia del Derecho Argentino Coleccioacuten de Textos y Documentos para la Historia del Derecho Argentino t V Buenos Aires Imp de la Universidad de Buenos Aires 1945 (Li-bro I Ley 10 laquoQue los Espantildeoles puedan casar con Indias y al contrario a su voluntadraquo t2 p 138 citado en Villafantildee 129

156 JUAN FRANCISCO MAURA

Entristece ver coacutemo se manejan las cifras de estas mujeres como si de ganado o de bienes suntuarios se tratase Por otra parte existieron irregularidades como la de pobla-doras espantildeolas que vivieron amancebadas con hombres que ya estaban casados en la peniacutensula Normalmente esto ocurriacutea cuando la estancia del conquistador se prolonga-ba maacutes de lo debido en lugares donde habiacutea pocas espantildeolas Muchas veces nacieron hijos de estas uniones que hicieron auacuten maacutes difiacutecil la situacioacuten para las mujeres que esperaban en Espantildea a un marido que ya no teniacutea ningunas intenciones de volver En los juicios de residencia los documentos acostumbran a citar estos casos ya que era parte de su obligacioacuten castigar las irregularidades extramatrimoniales y salvaguardar las buenas costumbres familiares que con tanto intereacutes se deseaba mantener laquoUn ejemplo nos lo da la isla de Cuba donde en 1532 viven con hombres casados Olalla Hernaacuten-dez Santillana Aranda lsquola Cordobesarsquo Catalina de Leoacuten Catalina Saacutenchez Francisca Hernaacutendez Mayor de Azebedo Juana de Valeros y lsquouna mujer que estaba en casa de Ayalarsquoraquo (Borges 416)

Estos casos no fueron aislados y mucho menos en Cuba centro neuraacutelgico de todo el movimiento de ida y vuelta entre la metroacutepoli y el Nuevo Mundo Estas ocho acusa-ciones por lo tanto no tienen porqueacute considerarse extraordinarias y menos en el lugar maacutes cosmopolita de las Indias en esos momentos al que llegaban flotas a cada momen-to Al parecer existieron casos parecidos en el Riacuteo de la Plata Peruacute y Nueva Espantildea (Ratcliffe 347) El margen legal para que estas mujeres viviesen como quisiesen estuvo limitado por una moral que veiacutea uacutenicamente en el matrimonio o el convento una salida laquovaacutelidaraquo para que fueran aceptadas socialmente Los hombres en iguales circunstan-cias fueron juzgados por una laquomoralraquo mucho maacutes permisiva

La mujer y el cuerpo eclesiaacutestico

Pues iquestquieacuten diablos os traiacutedo aquiacute dijo don Quijote siendo hombre de la iglesia iquestQuieacuten sentildeor replicoacute el caiacutedo laquomi desventuraraquo Pues otra mayor os amenaza dijo don Quijote sino me satisfaceacuteis a todo cuanto primero os pregunteacute (Cervantes Don Quijote )

Otro factor a tener en cuenta en un anaacutelisis sobre la presencia de la mujer en el Nuevo Mundo es el que tiene que ver con la institucioacuten maacutes importante de las que llegaron desde Europa la iglesia catoacutelica Sin aacutenimo de criticar a tan compleja institucioacuten res-ponsable de gran parte de los aconteceres en el Nuevo Mundo vale la pena analizar algunas singularidades Muchos de sus miembros fueron grandes ejemplos de valor e inteligencia a la hora de tratar los maacutes variados y escabrosos asuntos con los que se encontraron los cristianos en la otra orilla durante este periacuteodo Se debe resaltar tam-

157ESPANtildeOLAS DE ULTRAMAR EN LA HISTORIA Y EN LA LITERATURA

bieacuten su caraacutecter medieval en la manera de hacer apostolado y de entender y tratar a los potenciales cristianos Si se tienen en cuenta los privilegios y prerrogativas que algunas de las altas jerarquiacuteas eclesiaacutesticas tuvieron no seriacutea superfluo estimar que un respeta-ble porcentaje de la poblacioacuten de origen laquodudosoraquo muy bien podiacutea venir de la misma iglesia Fueron muchas las viacutectimas y muchas las familias divididas por un padre laquoinvi-sibleraquo Gran parte de los hijos o laquosobrinosraquo de estos sacerdotes pasaron a ocupar cargos similares incluyendo los privilegios que estos cargos llevaban consigo como si se trata-se de cualquier otro oficio gremial transmitido generacionalmente regla tan comuacuten en la Europa medieval Todaviacutea a finales del siglo XIII en Espantildea los derechos de los hijos y nietos de los sacerdotes estaban protegidos por la ley sin que hubiesen podido ser erradicados por las reformas gregorianas (Ratcliffe 347)139

Las letras espantildeolas ya se haciacutean eco de estos lances amorosos entre representantes de la Iglesia y ciertas damas del lugar desde los tiempos del poeta riojano Gonzalo de Berceo En su obra maacutes conocida Los milagros de Nuestra Sentildeora Berceo describe con un realismo ingenuo y sencillo relatos de humor y de humanismo sobre aquellos hombres de carne y hueso que eran perdonados por la intercesioacuten de la Virgen Mariacutea Juan Ruiz por su lado haraacute de su Libro de buen amor la obra maacutes representativa en este sentido Seriacutea prolijo recordar la actuacioacuten de la Iglesia durante diversos periacuteodos de la Edad Media no soacutelo en Espantildea sino en toda Europa En la Espantildea musulmana del siglo XII concretamente en Sevilla el comportamiento de los representantes de la iglesia cristia-na (mozaacuterabe) en territorio islaacutemico es duramente criticado por el sevillano Ibn Abdun Este precioso documento muestra el estricto control y falta de confianza que existiacutea sobre la mujer prohibieacutendolas que entrasen en las laquoabominablesraquo iglesias cristianas

porque los cleacuterigos [cristianos] son libertinos fornicadores y sodomi-tas Asimismo debe prohibirse a las mujeres francas que entren en la iglesia maacutes que en diacuteas de funcioacuten o fiesta porque alliacute comen beben y fornican con los cleacuterigos y no hay uno de ellos que no tenga dos o maacutes de estas mujeres con que acostarse Han tomado esta costumbre por haber declarado iliacutecito lo liacutecito y viceversa Convendriacutea pues mandar a los cleacuterigos que se casasen como ocurre en Oriente y que si quie-ren lo hagan (Leacutevi-Provenccedilal 150)

Pese a existir una convivencia paciacutefica durante gran parte de la Edad Media entre los tres credos monoteiacutestas de Espantildea (cristianos musulmanes y judiacuteos) esto no suponiacutea que no existiese desprecio y desconfianza entre estos grupos religiosos Dice Abdun resaltando el peligro que suponiacutea que una mujer entrase en casa de un cleacuterigo cristiano de vida ceacutelibe

No debe tolerarse que haya mujer sea vieja o no en casa de un cleacuterigo mientras eacuteste rehuacutese casarse Obliacutegueseles ademaacutes a circuncidarse co-mo les obligoacute al-Mutadid pues si a lo que dicen siguen el ejemplo de Jesuacutes (iexclDios les bendiga y salve) Jesuacutes se circuncidoacute y precisamente ellos que han abandonado esta praacutectica tienen una fiesta que celebran solemnemente el diacutea de su circuncisioacuten (Leacutevi-Provenccedilal 150-151)

139 Valdriacutea la pena ver si han cambiado mucho las cosas desde hace quinientos antildeos a esta parte o si in-cluso la iglesia moderna ha retrocedido en tolerancia en cuanto a las relaciones sexuales de los representantes de la Iglesia

158 JUAN FRANCISCO MAURA

El historiador argentino Germaacuten Arciniegas recoge un pasaje ilustrativo de lo men-cionado anteriormente pero trasladado al ambiente de la colonia diciendo que incluso en poblaciones pequentildeas como Santa Fe con poco maacutes de un convento y una ermita la fragilidad de la carne enredaba a frailes soldados y virreyes por igual laquoEl buen So-liacutes que murioacute en olor de santidad con la cabeza reclinada sobre un par de ladrillos y en saya de franciscano cruzaba en las noches el solar de su palacio para ir a besar a la Marichuelaraquo (118-19)

Arciniegas recoge tambieacuten un suceso aparecido en el diario de Lima en 1667 que no tuvo que ser extraordinario durante los primeros antildeos de la colonia laquoEl fraile carmelita mdashGrande hereje y siendo sacerdote deciacutea misa gran perro lujurioso deshonesto que relatando sus maldades dijo que en cierta ciudad habiacutea conocido carnalmente a maacutes de trescientas y sesenta mujeres y en un convento de monjas habiacutea cometido muchos sacrilegios Este lo trujeron preso de Buenos Aires por Chileraquo (119)

Las controversias de la iglesia moderna sobre las relaciones que los eclesiaacutesticos de-ben tener con el sexo femenino parece que no han encontrado todaviacutea respuesta Sigue existiendo miedo y recelo a que la mujer comparta no soacutelo poder en la jerarquiacutea de la iglesiacutea sino en la vida privada de los miembros de la institucioacuten En la Nueva Espantildea el primer obispo de Meacutexico Juan de Zumaacuterraga viendo en la mujer un ser de tentacioacuten irresistible prohibioacute terminantemente la presencia de eacutestas en su casa Ni siquiera para su limpieza y aseo El franciscano Juan de Torquemada se refiere a este comportamien-to como una de las virtudes del popular obispo

Fue este benditiacutesimo prelado muy amigo de la virtud y de virtuosos y aceacuterrimo reprehendedor de vicios y viciosos y tan enemigo de la ociosidad que no permitiriacutea que alguno de su casa estuviese ocioso fue amiciacutesimo de la limpieza por lo cual jamaacutes consintioacute que mujer alguna entrase en su casa aunque fuese necesaria al servicio de ella ni nunca consintioacute que por alguna ocasioacuten subiese mujer a lo alto y aposentos de ella antes lo teniacutea todo cerrado como un monasterio porque sabiacutea (como quien tambieacuten sabiacutea) que la ocasioacuten suele derribar los maacutes fuertes y robustos corazones (450 lib 20 cap 31)

No fueron uacutenicamente miembros de la iglesia catoacutelica los que valoraron la lucha con-tra la tentacioacuten siguiendo al pie de la letra el crudeliacutesimo refraacuten laquoentre santa y santo pared de cal y cantoraquo Se tienen algunas noticias de la vida social de los primeros tiem-pos de la colonia En estos documentos se puede observar coacutemo no distaban mucho las oacuterdenes que se dictaban en la metroacutepoli y las que se llevaban a cabo en la Nueva Espantildea La vida social tanto de damas como de algunos miembros de la iglesia de las colonias era maacutes laquorelajadaraquo de lo que las normas permitiacutean Gracias a la informacioacuten ofrecida por Manuel Romero de Terreros disponemos de los nombres de las primeras virreinas

Las esposas de los primeros cinco Virreyes Don Antonio de Mendoza Don Luis de Velasco Don Gastoacuten de Peralta Don Martiacuten Enriacutequez de Almanza y Don Lorenzo Suaacuterez de Mendoza Conde de la Coruntildea fueron respectivamente Dontildea Caterina de Vargas Dontildea Ana de Cas-tilla y Mendoza hija de Don Diego de Castilla Sentildeor de Gor y Caba-

159ESPANtildeOLAS DE ULTRAMAR EN LA HISTORIA Y EN LA LITERATURA

llerizo de Carlos V Dontildea Leonor de Vieo Dontildea Mariacutea Manrique hija del Marqueacutes de Aguilar y Dontildea Catalina de la Cerda hija del segundo Duque de Medinaceli (Romero 2)

Existen noticias concretas de la seacuteptima virreina de la Nueva Espantildea (1586) dontildea Blanca de Velasco marquesa de Villamanrique En ellas destaca lo anteriormente men-cionado sobre la falta de tolerancia existente en aquellos tiempos difiacutecilmente com-prensible si no fuera por fragmentos esporaacutedicos conservados sobre la vida colonial en la Nueva Espantildea En la siguiente Relacioacuten hecha por autores anoacutenimos sobre la visita que hizo Fray Alonso Ponce Comisario General de la Orden Seraacutefica a las provincias de la Nueva Espantildea se mencionan las eneacutergicas medidas que con los miembros de su orden en su opinioacuten de moral laquomuy relajadaraquo tomoacute este religioso Tambieacuten aparecen mencionadas sus relaciones con la Virreina

Captoacutese ademaacutes la enemistad del gobernante y de la Virreina Dontildea Blanca de Velasco hija del cuarto Conde de Nieva sentildeora seguacuten pare-ce de conducta ligera y caraacutecter maacutes que dominante laquoPor este mismo tiempo (septiembre de 1586) fueron el Virey y la Vireyna a holgarse y recrearse en la cibdad de Xochimilco Posoacute con toda su casa dentro de nuestro convento en un dormitorio deacutel y detuacutevose alliacute siete u ocho diacuteas en que los indios les hicieron grandes fiestas aunque les costaron caras porque en una dellas murieron dos o tres dellos con un tiro que se disparoacute y reventoacute y al principal indio de aquella cibdad hirieron muy malraquo (Romero 3-4)

A pesar del riacutegido control eclesiaacutestico y civil que habiacutea en la Nueva Espantildea existieron tambieacuten pareacutentesis en los que incluso miembros de la iglesia y mujeres mdashhumanos al fin y al cabomdash pudieron disfrutar de algunos momentos de regocijo y alegriacutea Con-tinuando con la cita anterior el mismo autor se queja del laquoexcesoraquo de libertad en los frailes que se suponiacutea que teniacutean que profesar una extremada pobreza y no digamos castidad En primer lugar se describen pormenorizadamente la abundancia en el tipo y cantidad de comida de toda clase dulces y vino que se consumieron con largueza y generosidad durante aquellas fiestas Pero lo que maacutes indigna al autor (o autores) fue que llegasen a entrar mujeres en el convento

y aunque todo esto es malo delante de Dios y delante de los hom-bres lo que maacutes mal parecioacute y de que todo el mundo tuvo que mur-murar fueacute la demasiada libertad rotura y disolucioacuten que hubo en en-trar y estar muy de propoacutesito mujeres no soacutelo la Vireyna y las suyas sino otras muchas dentro del dicho convento y andar por las celdas como si fuese cosa profana y como si no hubiera breve apostoacutelico que soacute graves penas y censuras prohibe estas entradas y como si a los frai-les no los comprendiera el dicho breve por admitirlas y no estuviera asiacute declarado y mandado por nuestros estatutos generales de Toledo (Romero 4-5)

La preocupacioacuten por las laquotentaciones de la carneraquo fuera del matrimonio siempre es-tuvo en la mente de los religiosos espantildeoles asiacute como de otras nacionalidades y reli-

160 JUAN FRANCISCO MAURA

giones que intentaban vanamente erradicar algo tan intriacutenseco al ser humano como a cualquier otra especie animal Esta preocupacioacuten se acentuoacute mucho maacutes en el Nuevo Mundo donde muchas sociedades tribales no veiacutean a la mujer como parte integrante de su propiedad privada La razoacuten es obviamente socioloacutegica y ha existido desde el principio de los tiempos en las civilizaciones maacutes primitivas laquoNo desearaacutes a la mujer del proacutejimoraquo El quebrantar este precepto equivaldriacutea a desestabilizar desde su base a la sociedad judeo-cristiana fundamentada en la familia Las penas aplicadas en estas transgresiones seraacuten lo suficientemente severas como para marginar socialmente mdashen el mejor de los casosmdash a aquellos que las pongan en praacutectica Siendo la mujer la encar-gada por la naturaleza de trasmitir la descendencia de la especie su libertad sexual se veraacute limitada por el peligro de quedar embarazada cada vez que ignore tal elemental precepto140

Primeras escritoras del Nuevo Mundo

Contra cuerdos y contra locos estaacute obligado cualquier caballero andante a volver por la honra de las mujeres cualesquiera que sean Cuanto maacutes por las reinas de tan alta guisa y pro como fue la reina Madaacutesima a quien yo tengo particular aficioacuten por sus buenas partes porque fuera de haber sido fermosa ademaacutes fue muy prudente y muy sufrida en sus calamidades que las tuvo muchas (Cervantes Don Quijote)

Fueron varias las escritoras que durante los siglos XVI y XVII tuvieron una relacioacuten di-recta o indirecta con el Nuevo Mundo Muchas de ellas eligieron la vida monaacutestica mdashen algunos casos como refugio huyendo de sus maridosmdash uacutenica salida en una estructura social en donde no eran muchas las opciones especialmente en una eacutepoca donde el fac-tor religioso pesaba casi tanto como el econoacutemico pero sobre todo para dedicarse a una vida espiritual difiacutecilmente alcanzable en otras circunstancias Mariloacute Vigil apunta que las monjas que lo eran por su propia voluntad ademaacutes de tener inquietudes religiosas tambieacuten las teniacutean intelectuales como es el caso de la escritora miacutestica espantildeola Santa Teresa de Jesuacutes (1515-1582) que ademaacutes de tener una de las vidas maacutes interesantes que se conozcan supo sacar tiempo para escribir las maacutes bellas manifestaciones de la poesiacutea liacuterica y sobre todo de la prosa castellana (Vigil 237-38) Cada una de estas mujeres de-dicadas a la vida literaria y espiritual de su tiempo se merece muchiacutesimo maacutes espacio del que se les pueda ofrecer en estas pocas liacuteneas No obstante con estas pasajeras men-

140 Aunque afortunadamente las cosas han cambiado para la mujer no se debe dejar de mencionar la can-tidad de abusos sexuales de la que es viacutectima en la sociedad moderna

161ESPANtildeOLAS DE ULTRAMAR EN LA HISTORIA Y EN LA LITERATURA

ciones se espera al menos incluirlas y poder despertar el suficiente intereacutes para que sus vidas y sus obras no sigan sumergidas en las simas del olvido Para que estas mujeres de la iglesia pudiesen satisfacer su curiosidad cognoscitiva era necesario romper todas aquellas barreras que supusiesen un estorbo o una restriccioacuten a la hora de investigar consultar o hablar con cualquier persona religiosa de cualquier orden o secular ya fue-se obispo o cleacuterigo Las posiciones intelectuales entre las diferentes oacuterdenes religiosas fueron muy dispares como bien es sabido No eran iguales los planteamientos teoloacute-gicos de los dominicos que los de los franciscanos o los de los carmelitas que los de los agustinos o jesuitas Era necesario por lo tanto tener acceso a estas fuentes de informa-cioacuten para poder constrastar las diferencias y hacer valoraciones propias (Vigil 237-38) El escritor espantildeol Caro Baroja destaca el caraacutecter enciclopeacutedico del catolicismo donde se han integrado corrientes y posturas muy dispares que a traveacutes del diaacutelogo daban cierto espacio al creyente con maacutes curiosidad intelectual para que este pudiese compa-rar y valorar las diferentes opciones que se le ofreciacutean (Vigil 237-38)

Varias de estas mujeres intelectuales fueron hijas de conquistadores que aunque na-cidas en suelo americano seguiacutean expresaacutendose en la lengua de sus padres con no me-nos fuerza que sus contemporaacuteneas peninsulares Es cierto que existieron numerosas escritoras en el Nuevo Mundo durante el siglo XVIII algunas dedicadas incluso al estudio de las matemaacuteticas como la mexicana Dontildea Francisca Gonzaga y Castillo Pero para limitar el presente trabajo a los siglos XVI y XVII uacutenicamente se incluiraacuten ejemplos de estos dos siglos

La peruana Josefa de Alarcoacuten publicoacute en 1648 unas liras dedicadas a las Exequias del Priacutencipe Baltasar Carlos

Cifro en capilla breveEl tribunal de la Magestad maacutes graveEn fe de lo que debeA Carlos que en dos mundos no cabe141

El caso de Sor Jeroacutenima de la Asuncioacuten es muy interesante una mujer que tuvo la oportunidad de viajar a Meacutexico y posteriormente a las Filipinas para cumplir con las mi-siones que le habiacutean sido encomendadas por su orden Nacida en Toledo en 1555 en el seno de una noble y acaudalada familia estuvo destinada a recorrer el mundo ofrecien-do sus servicios a todos los necesitados distinguieacutendose por su ardiente caridad laquovien-do que los galeotes eran tratados con dureza excesiva sobre todo cuando los llevaban de un pueblo a otro procuroacute aliviar las penas de aquellos desgraciados y lo consiguioacute en parteraquo (Serrano y Sanz 268 65) Hija del licenciado e ilustre jurista Pedro Garciacutea Yaacute-ntildeez y de dontildea Catalina de la Fuente ingresoacute contra su voluntad en el monasterio de las Clarisas de Santa Isabel de los Reyes (Toledo) el 5 de agosto de 1570 (Trevintildeo 46) hay que decir que eacutesta no seraacute la uacutenica voluntad contra la que tuvo que luchar

Sor Jeroacutenima se embarcoacute para Meacutexico y de alliacute partioacute hacia Manila junto con siete compantildeeras en el famoso laquoGaleoacuten de Manilaraquo que saliacutea anualmente del puerto mexi-cano de Acapulco Su viaje a las Filipinas duroacute un antildeo y tres meses desde su salida de Espantildea tiempo en el que demostroacute un gran valor y determinacioacuten por el soacutelo hecho de

141 Manuel Serrano y Sanz Apuntes para una biblioteca de escritoras espantildeolas desde el antildeo 1401 al 1833 vols 268 269 270 271 Biblioteca de Autores Espantildeoles (Madrid Atlas 1975) 268 19

162 JUAN FRANCISCO MAURA

embarcarse en tan precarias naves Fue la primera misionera de Oceaniacutea muriendo en Manila en 1621 Alliacute fundoacute el monasterio de Santa Clara que perviviriacutea hasta ser bom-bardeado en la Segunda Guerra Mundial (Trevintildeo 47) Escribioacute su Vida donde trata de la fundacioacuten del convento y de todas las tribulaciones mdashllegoacute a ser excomulgadamdash y satisfacciones que una vida dedicada a una causa justa proporciona Tambieacuten escribioacute una obra de caraacutecter filosoacutefico-teoloacutegico titulada Carta de marear en el mar del mundo nombre alegoacuterico que da cuenta de la enorme distancia recorrida a traveacutes del laquomar del espiacuterituraquo por sor Jeroacutenima He aquiacute algunos de sus versos de caraacutecter religioso

Vuestra soy para vos naciacuteiquestQueacute mandaacuteis hacer de miacute Inaccesible grandezaEterna Sabiduriacuteay bondad del alma miacuteaDios un ser poder y Altezamirad la suma pobrezade eacutesta que se ofrece aquiacuteiquestQueacute mandaacuteis hacer de miacute (Serrano y Sanz 268 66)

Ya en Meacutexico tenemos otro ejemplo de una mujer dedicada por completo a Dios y al estudio y composicioacuten de obras de caraacutecter teoloacutegico Dontildea Ana Mariacutea del Costa-do de Cristo nacida en la ciudad de Tlaxcala hacia el antildeo 1650 Tomoacute la orden de San Francisco para consagrarse a las labores de su orden y a la escritura Se dice que con los escritos de Dontildea Ana Mariacutea se podriacutean formar veinte tomos (Serrano y Sanz 268 282) Estas son algunas de sus obras Vida y muerte de Jesucristo Nuestro Sentildeor Vida del Seraacutefico Padre San Francisco de Asiacutes Vida de la iacutenclita Virgen Santa Clara Vida del sutiliacutesimo doctor Juan Duns Escoto

Pero no todas las monjas tuvieron vidas tan dedicadas al estudio y la oracioacuten Loacutegica-mente entre un nuacutemero tan grande de mujeres existioacute de todo y seriacutea un error pensar que todos los conventos femeninos estaban integrados por laquocaacutendidas palomasraquo Una monja en el siglo XVI y XVII teniacutea mucha maacutes fuerza que una mujer ordinaria ya que actuaban en grupo y la entrada a los recintos donde viviacutean estaba permitida solo a mu-jeres Esta situacioacuten las haciacutea mucho maacutes fuertes a todos los niveles que una mujer sola protegida uacutenicamente por su familia laquoLas monjas durante los siglos XVI y XVII lucharon por eludir la clausura y por zafarse del control que los frailes de las secciones masculi-nas de sus congregaciones ejerciacutean sobre ellasraquo (Vigil 230) Soacutelo un antildeo maacutes tarde que dontildea Ana Mariacutea del Costado de Cristo en 1651 y a 12 leguas de Meacutexico nacioacute la sin par Sor Juana Ineacutes de la Cruz hija de don Pedro Manuel de Asbaje natural de Vergara (Vizcaya) y de Dontildea Isabel Ramiacuterez de Santillana hija de espantildeoles (Serrano y Sanz 268 289) Por ser sin lugar a dudas la poeta maacutes importante de su tiempo y probable-mente la maacutes conocida del mundo hispano no profundizaremos en ella Su obra es un canto a la inteligencia y el exponente maacutes destacado de la literatura barroca americana tanto en prosa como en verso Destacareacute simplemente que Sor Juana Ineacutes pese a vivir en un sociedad donde no eran excesivas las libertades concedidas a las mujeres tuvo el caraacutecter y la determinacioacuten de dejarnos las maacutes bellas poesiacuteas amorosas que si bien estuvieron enmarcadas en un ambiente religioso como era de esperar por su condicioacuten

163ESPANtildeOLAS DE ULTRAMAR EN LA HISTORIA Y EN LA LITERATURA

pudieron transcender como unas de las maacutes bellas manifestaciones literarias que hoy en diacutea se conservan Fue su agudeza mental sensibilidad y cultura tal que no fueron suficientes los soacutelidos muros del convento para contener el genio de tan extraordinaria mujer Recordemos sus conocidiacutesimos versos en defensa de las mujeres

Hombres necios que acusaacuteisa la mujer sin razoacutensin ver que sois la ocasioacutende lo mismo que culpaacuteis142

Las metaacuteforas y la delicadeza que emplea en rebatir a su obispo en su laquoRespuesta a sor Filotea de la Cruzraquo no son solamente el epiacutetome del feminismo de su tiempo sino una de las maacutes brillantes manifestaciones del barroco hispano Poesiacutea teatro ensayo y un conocimiento extraordinario de las ciencias claacutesicas de su tiempo hacen de esta mujer un ejemplo extraordinario de las letras universales Ya son cientos los artiacuteculos y libros que se han escrito sobre Sor Juana y no dejan de aparecer tesis doctorales sobre los maacutes diversos temas conectados con la citada autora143 Como nos dice Stephanie Merrim en su documentada obra Early Modern Womenrsquos Writing and Sor Juana Ineacutes de la Cruz

She wrote and published on secular themes as atypical for a nun as human love Her remarkably extensive writings essayed and reenacted most of the (male) poetic dramatic theological and even philosophi-cal discourses of her times in the metropolis making her works a com-pendium of baroque culture in its diversity and syncretism Sor Juana self-creation as a learned women effectively toppled many of the walls in which she was materially enclosed and positioned her within the dynamic world of early modern European culture (xii)

No se debe dejar de mencionar a otras escritoras novohispanas de la eacutepoca que aun-que no fueron tan proliacuteficas y relevantes como Juana Ineacutes de la Cruz dejaron testimo-nio de algunos acontecimientos que tienen intereacutes socioloacutegico o testimonial Este es el caso de Dontildea Mariacutea Estrada Medinilla de igual nombre y apellido que la mujer que acompantildeoacute a las tropas de Corteacutes en su primera entrada a Meacutexico Natural de Meacutexico publicoacute toda su obra a mediados del siglo XVII concentraacutendose principalmente en la lle-gada del Marqueacutes de Villena virrey y capitaacuten general de la Nueva Espantildea a la ciudad de Meacutexico en el antildeo 1640 Escrita en octavas reales la obra trata de las fiestas de toros y cantildeas con que se obsequioacute al citado virrey Fue impresa en Meacutexico en 1641 (Serrano y Sanz 269 402)

Mucho maacutes importante para el presente libro es Dontildea Isabel de Guevara que escribioacute en 1556 la carta en que se expone la ayuda que ofrecieron las mujeres en el descubri-miento y conquista del Riacuteo de la Plata No cabe la menor duda de que esta carta es uno

142 Para una mejor comprensioacuten del caraacutecter de esta excepcional mujer veacutease entre los numeros trabajos publicados Fredo Arias de la Canal Intento de psicoanaacutelisis de Juana Ineacutes y otros ensayos sorjuanistas (Meacutexico Frente de Afirmacioacuten Hispanista 1972) 47

143 Veacuteanse entre otros trabajos Octavio Paz Sor Juana Ineacutes de la Cruz o las trampas de la fe Georgina Sabat de Rivers En busca de Sor Juana Margo Glantz Sor Juana la comparacioacuten y la hipeacuterbole Gerard C Flynn Sor Juana Ineacutes de la Cruz Stephanie Merrim Feminist perspectives on Sor Juana Ineacutes de la Cruz Pamela Kirk Sor Juana Ineacutes de la Cruz religion art and feminism

164 JUAN FRANCISCO MAURA

de los documentos maacutes importantes con que contamos en relacioacuten a la aportacioacuten fe-menina en el proceso de la conquista de Ameacuterica Su importancia viene dada por varios factores Primero es uno de los primeros testimonios mdashsi no el primeromdash en donde se expone abiertamente la indispensable colaboracioacuten de las mujeres en el descubrimien-to y conquista de tierras en el Nuevo Mundo laquoQue si no fuera por ellas todos fueran acabadosraquo En segundo lugar la informacioacuten vertida en estas liacuteneas presenta en parte la manera de pensar de una mujer espantildeola en tales circunstancias Extraordinario tes-timonio de primera mano que nos da una idea de lo que significoacute en muchos casos el valor y entrega constantes de muchas de estas mujeres que auacuten a riesgo de perder sus vidas no dudaron en luchar al lado de los hombres por una causa que consideraban laquocomuacutenraquo

La relevancia histoacuterica de dicha carta hace que merezca ser transcrita en su totali-dad

Carta de dontildea Isabel de Guevara a la princesa gobernadora dontildea Juana exponiendo los trabajos hechos en el descubrimiento y conquista del Riacuteo de la Plata por las mujeres para ayudar a los hombres y pidiendo repartimiento

para su marido Asuncioacuten 2 de julio de 1556

Muy alta y muy poderosa sentildeora

A esta provincia del Riacuteo de la Plata con el primer gobernador de ella don Pedro de Mendoza hemos venido ciertas mujeres entre las cuales ha querido mi ventura que fuese yo la una y como la armada llegase al puerto de Buenos Aires con mil quinientos hombres y les faltase el bastimento fue tamantildea el hambre que a cabo de tres meses murie-ran los mil esta hambre fue tamantildea que ni la de Jerusalem se le puede igualar ni con otra ninguna se puede comparar Vinieron los hombres en tanta flaqueza que todos los trabajos cargaban de las pobres mu-jeres asiacute en lavarles las ropas como en curarles hacerles de comer lo poco que teniacutean limpiarlos hacer centinela rondar los fuegos armar las ballestas cuando algunas veces los indios les veniacutean a dar guerra hasta cometer a poner fuego en los versos y a levantar los soldados los que estaban para ello dar arma por el campo a voces sargentean-do y poniendo en orden los soldados porque en este tiempo como las mujeres nos sustentamos con poca comida no habiacuteamos caiacutedo en tanta flaqueza como los hombres Bien creeraacute V A que fue tanta la so-licitud que tuvieron que si no fuera por ellas todos fueran acabados y si no fuera por la honra de los hombres muchas maacutes cosas escribiera con verdad y los diera a ellos por testigos Esta relacioacuten bien creo que la escribiraacuten a V A maacutes largamente y por eso cesareacute Pasada esta tan peligrosa turbunada determinaron subir el riacuteo arriba asiacute flacos como estaban y en entrada de invierno en dos bergantines los pocos que quedaron vivos y las fatigadas mujeres los curaban y los miraban y les guisaban la comida trayendo la lentildea a cuestas fuera del naviacuteo y animaacutendolos con palabras varoniles que no se dejasen morir que presto dariacutean en tierra de comida metieacutendolos a cuestas en los

165ESPANtildeOLAS DE ULTRAMAR EN LA HISTORIA Y EN LA LITERATURA

bergantines con tanto amor como si fueran sus propios hijos Y como llegamos a una generacioacuten de indios que se llaman tinbues sentildeores de mucho pescado de nuevo los serviacuteamos en buscarles diversos modos de guisados porque no les diese en rostro el pescado a causa de que lo comiacutean sin pan y estaban muy flacos Despueacutes determinaron subir el Paranaacute arriba en demanda de bastimento en el cual viaje pasaron tanto trabajo las desdichadas mujeres milagrosamente quiso Dios que viviesen por ver que en ellas estaba la vida de ellos porque todos los servicios del naviacuteo los tomaban ellas tan a pechos que se teniacutea por afrentada la que menos haciacutea que otra sirviendo de marear la vela y gobernar el naviacuteo y sondar de proa y tomar el remo al soldado que no podiacutea bogar y escotar144 el naviacuteo y poniendo por delante a los soldados que no se desanimasen que para los hombres eran los trabajos verdad es que a estas cosas ellas no eran apremiadas ni las haciacutean de obliga-cioacuten ni las obligaba si solamente la caridad Asiacute llegaron a esta ciudad de la Asuncioacuten que aunque ahora estaacute muy feacutertil de bastimentos en-tonces estaba de ellos muy necesitada que fue necesario que las muje-res volviesen de nuevo a sus trabajos haciendo rosas con sus propias manos rosando y carpiendo y sembrando y recogiendo el bastimento sin ayuda de nadie hasta tanto que los soldados guarecieron de sus fla-quezas y comenzaron a sentildeorear la tierra y adquirir indios e indias de su servicio hasta ponerse en el estado en que ahora estaacute la tierra He querido escribir y traer a la memoria de V A para hacerle saber la ingratitud que conmigo se ha usado en esta tierra porque al presente se repartioacute por la mayor parte de los que hay en ella asiacute de los anti-guos como de los modernos sin que de miacute y de mis trabajos se tuviese ninguna memoria y me dejaron de fuera sin me dar indio ni ninguacuten geacutenero de servicio Mucho me quisiera hallar libre para me ir a presen-tar delante de VA con los servicios que a SM he hecho y los agravios que ahora se me hacen mas no estaacute en mi mano porque estoy casada con un caballero de Sevilla que se llama Pedro de Esquivel que por servir a SM ha sido causa que mis trabajos quedasen tan olvidados y se me renovasen de nuevo porque tres veces le saqueacute el cuchillo de la garganta como allaacute VA sabraacute A que suplico mande me sea dado mi repartimiento perpetuo y en gratificacioacuten de mis servicios [en el origi-nal del AHN Diversos doc 141 dice ademaacutes mande que sea proveydo mi marido de alguacuten cargo conforme a la calidad de su persona pues el de su parte por sus servicios lo merece] lo merece Nuestro sentildeor acre-ciente su Real vida y estado por muy largos antildeos De esta ciudad de la Asuncioacuten y de julio 2 1556 antildeosServidora de V A que sus Reales manos besa

Dontildea Isabel Guevara

144 Sacar agua de un riacuteo acequia o presa

166 JUAN FRANCISCO MAURA

Sobremdash A la muy alta y muy poderosa sentildeora Princesa dontildea Joana Gobernadora de los reinos de Espantildea etc ndash En su Consejo de Indias (Isabel de Guevara 619-21)

Iroacutenicamente la carta teniacutea que llegar a manos de la desdichada heredera del trono de Castilla e hija de los Reyes Catoacutelicos Juana laquola Locaraquo que habiacutea muerto el antildeo an-terior Son profeacuteticas las palabras de esta mujer no soacutelo porque sus hechos personales quedasen en el olvido sino porque incluso se ha borrado la historia de las mujeres en el Nuevo Mundo negando su presencia Por lo menos Isabel Guevara tuvo acceso a una pluma iquestCuaacutentas seriacutean las que ni siquiera sabriacutean escribir

Otra contemporaacutenea fue dontildea Leonor de Iciz que vivioacute durante la segunda mitad del siglo XVI Interesa sobre todo por los sonetos que escribioacute en elogio de Ercilla soldado que participoacute en la conquista de Chile y que se inmortalizoacute con su obra La Araucana (Serrano y Sanz 269 534) Lo mismo hizo Dontildea Bernarda Lintildeaacuten en 1610 autora de otro soneto en memoria del capitaacuten Gaspar Peacuterez de Villagraacute que participoacute en la conquista de Nuevo Meacutexico (Serrano y Sanz 270 14) Los escritos de estas mujeres tratan de de dos de las eacutepicas maacutes dramaacuteticas de la conquista

En el Peruacute y en pleno siglo XVII aparece otra fundadora de conventos Sor Bernardina de Jesuacutes que ademaacutes fue comparada con Santa Teresa por la semejanza de sus laquocartasraquo con las de la santa de Avila Fue fundadora del convento de Tacunga en Quito maacutes tarde destruiacutedo por un terremoto Dice Serrano y Sanz con respecto a su biografiacutea un tanto legendaria que fue carmelita descalza de Lima y hermana de Dontildea Mariacutea Benavides y Esquivel abuela de D Pedro de Peralta Barnuevo (Serrano y Sanz 269 553) Dicen que esta santa se alimentoacute durante treinta antildeos con laquochochos y caacutescaras de naranja hecho tan raro como increiacuteble Cuando fallecioacute reparaban las monjas en ponerle una vara de azucenas porque habiacutea sido casada y aquellas flores aparecieron milagrosamente sobre el cadaacuteverraquo (Serrano y Sanz 269 553)

Otra limentildea del primer cuarto del siglo XVII con reputacioacuten de santa fue Dontildea Luisa Melgarejo En este caso no se trata de una religiosa de oficio sino de la mujer del doctor Juan de Soto La uacutenica diferencia es que dontildea Luisa al parecer teniacutea laquovisiones y reve-lacionesraquo lo que debioacute poner nervioso a maacutes de un miembro del tribunal del laquoSanto Oficioraquo que consideraron sus escritos laquoculpadosraquo De su papel de laquosantaraquo pasa por lo tanto al de laquoposesaraquo o laquoendemoniadaraquo El inquisidor de Lima Gaitaacuten escribioacute un infor-me donde a traveacutes de la opinioacuten puacuteblica y de otras averiguaciones se deciacutea que dontildea Luisa Melgarejo laquomujer santaraquo sabiacutea cuando las almas de los difuntos saliacutean del Purga-torio El diacutea 14 de noviembre de 1623 se decidioacute tomar posesioacuten de todos los cuadernos en los que habiacutea escrito las experiencias de todos sus laquoarrobos suspensiones extasis y revelacionesraquo Estos cuadernos una vez recogidos presentaron toda una serie de al-teraciones borrones adiciones enmiendas incluso diferente letra por lo que despueacutes de haber sido examinados resultaron culpables145 Excelente imaginacioacuten debioacute tener dontildea Luisa Melgarejo la suficiente al parecer para convencer a algunos miembros de la iglesia de que en sus escritos laquohabiacutea algoraquo que mereciacutea la pena Estas cosas ocurriacutean en Lima uno de los centros culturales maacutes importantes de la vida social y poliacutetica en la Ameacuterica espantildeola Lima a comienzos del siglo XVII seguacuten el empadronamiento llevado

145 Serrano y Sanz 270 47 Veacutease J T Medina Historia del tribunal del Santo Oficio de la Inquisicioacuten de Lima (1569-1820) (Santiago Imprenta Gutemberg 1887) Tomo II 34-41

167ESPANtildeOLAS DE ULTRAMAR EN LA HISTORIA Y EN LA LITERATURA

a cabo en 1614 por el marqueacutes de Montesclaros era una ciudad de 25000 habitantes de los que 11000 eran espantildeoles El nuacutemero de religiosos y religiosas llegaba a 1720 (Pittaluga 77)

Se sabe que en la Isla de Santo Domingo durante el siglo XVI nacioacute o al menos resi-dioacute una poeta de ceacutelebre apellido en los aconteceres del Nuevo Mundo Dontildea Elvira de Mendoza de la que se conserva un manuscrito en la Real Academia de la Historia laquoCantares miacuteos que estaacuteis rebeladosraquo Eugenio de Salazar hace un elogio de ella como poeta en un Soneto a la ilustre Poeta y Sentildeora Dontildea Elvira de Mendoza moradora en la ciudad de Santo Domingo (Serrano y Sanz 270 53)

Nacida en Burgos sobre el antildeo 1590 dontildea Luisa de Padilla merece un lugar aparte dentro del grupo de mujeres escritoras de su eacutepoca Por su estilo faacutecil y castizo su no-vedad de pensamientos y su rica erudicioacuten recibioacute el siguiente comentario de Manuel Serrano y Sanz laquoPocas figuras hay en nuestra historia literaria femenil que puedan compararse a esta eminente prosista acaso la maacutes notable de cuantas florecieron en Es-pantildea durante el siglo XVIIraquo (Serrano y Sanz 270 95-96) Este comentario y comparacioacuten deberiacutea ampliarse para que tambieacuten incluyese a laquola historia literaria varonilraquo

Dontildea Luisa fue defensora de la labor que la Inquisicioacuten estaba realizando en la laquolim-piezaraquo de mujeres laquosoldados del demonioraquo que existieron en algunas provincias espa-ntildeolas en aquel tiempo Muchas de las mujeres que combinaban la magia con los po-deres curativos fueron condenadas no solamente por hombres de la Inquisicioacuten sino tambieacuten por mujeres de todas las clases sociales como es el caso de Luisa de Padilla condesa de Aranda En su obra Elogios de la verdad e invectiva contra la mentira preveniacutea contra aquellos que practicaban artes en contra de la religioacuten cristiana La magiacutea negra seguacuten Padilla era la causante de que muriesen casi tantas personas como otras causas naturales habieacutendose descubierto hasta seis mil brujas en Vizcaya y Guipuzcua con-fesando una mujer de un pueblo pequentildeo haber matado con su laquomagiaraquo a ochocientas personas (Perry 31) Eran estos laquomales de ojoraquo y maldiciones seguacuten la autora las causas de que se secasen los pechos de las madres lactantes que se separasen las parejas casa-das y que abortasen las embarazadas (Perry 31)

Si se tiene en cuenta que dontildea Luisa estuvo emparentada con la maacutes rancia aristocra-cia de su tiempo o lo que es lo mismo con algunos de aquellos que en cierta manera dirigiacutean los destinos de Espantildea en aquella eacutepoca (Duques de Lerma Duque de Uceda Marqueacutes de Cueacutellar Conde de Santa Gadea Marqueacutes de Belmonte por citar algunos) se comprenderaacute mejor su identificacioacuten con una institucioacuten que en teoriacutea velaba por la salvaguarda de los valores laquoeternosraquo de una Espantildea destinada a ser la campeona del ca-tolicismo durante los siglos XVI y XVII El padre de dontildea Luisa fue don Martiacuten de Padilla y Manrique extraordinario militar que proboacute su valor contra enemigos moriscos ingle-ses holandeses piratas berberiscos y el renegado genoveacutes Muley Faxad Fue veterano de la batalla de Lepanto donde apresoacute a cuatro galeras y acompantildeoacute con su escuadra a la reina Dontildea Margarita de Austria cuando vino de Geacutenova en 1598 laquoHabiacutea obtenido a 24 de julio de 1587 el tiacutetulo de Conde de Santa Gadea y en 1596 el de Capitaacuten General de la Armada del mar Oceacuteanoraquo (Serrano y Sanz 27095-96)

Por otra parte tambieacuten se sabe que dontildea Luisa participoacute directamente y desde tem-prana edad en la praacutectica de algunas actividades intelectuales como la historia y la arqueologiacutea a la vez que dedicaba su tiempo a virtudes cristianas como la caridad y el socorro de los necesitados (Serrano y Sanz 270 97) Resulta mucho maacutes faacutecil compren-

168 JUAN FRANCISCO MAURA

der la postura ideoloacutegica de esta gran mujer si tienen en cuenta ademaacutes de los factores antes mencionados otros tantos de caraacutecter biograacutefico concernientes a su educacioacuten y matrimonio

Otra escritora fue la mexicana dontildea Mariacutea Casilda Pozo natural de Temestla (Meacutexi-co) Nacida en el mes de abril de 1682 dejoacute escrita su biografiacutea en 16 cuadernos el ma-nuscrito original se encuentra en la biblioteca del colegio de San Gregorio de Meacutexico Fue su confesor el jesuiacuteta Domingo Quiroga que fue quieacuten la incitoacute a escribir su obra (Serrano y Sanz 270 137) Sor Juana de San Antonio aparece a principios del siglo XVII formando parte de un grupo de religiosas espantildeolas que fueron a Manila por la ruta de Meacutexico Ademaacutes de distinguirse por sus cualidades personales su obra interesa por ofrecer informacioacuten testimonial y costumbrista acerca de la forma de vestir de chinos y japoneses (Serrano y Sanz 270 225)

Otra monja esta vez ecuatoriana fue Gertrudis de San Ildefonso Nacida en 1652 profesoacute su vocacioacuten en el convento de Santa Cruz de Quito dejando escrita su vida por mandato de su confesor el padre Martiacuten de la Cruz el cual hizo una biografiacutea laquoen tres gruesos voluacutemenesraquo Gertrudis de San Ildefonso murioacute en 1709 (Serrano y Sanz 270 300) en olor de santidad

Sor Mariacutea Ana Agueda de San Ignacio nacioacute el 3 de marzo de 1695 en la dioacutecesis de la puebla de los Angeles en un rancho del lugar de Santiago Tecaliacute (Serrano y Sanz 270300) Esta monja mexicana escribioacute varias obras durante su vida conventual a lo largo de la cual desempentildeoacute el cargo de priora por muchos antildeos Entre sus obras todas de caraacutecter piacuteo y de laquoamor divinoraquo escribioacute un curioso y laquocopiosoraquo tratado de la Leche virginal de la Soberana Madre de Dios El padre Fr Juan de Villa Saacutenchez hace el siguiente comentario al respecto laquoen que hablando primero en sentido natural de los beneficios que debemos a Nuestra Sentildeora pasa a tratar en sentido miacutestico y alegoacuterico enten-diendo en la leche la doctrinaraquo (Serrano y Sanz 270301) Mexicana fue tambieacuten Sor Petronila de San Joseacute que ejercioacute como abadesa del Real monasterio de Jesuacutes Mariacutea de la ciudad de Meacutexico Escribioacute Vidas de varias religiosas ejemplares obra que tiene su im-portancia ya que al parecer laquoDe esta obra se sirvioacute D Carlos de Siguumlenza y Goacutengora para escribir su Parayso Occidental (Meacutexico 1684) seguacuten eacutel mismo declara en el proacutelogo diciendo lsquoa quien si hay algo bueno en esta historia se le debe todorsquoraquo (Serrano y Sanz 270 354) Menos conocida fue su compatriota Sor Luisa de Santa Catalina natural de Xacona laquopueblo situado en las inmediaciones de Zamora (Meacutexico)raquo siendo bautizada en 1682 Escribioacute Cartas espirituales a su confesor el P Juan Loacutepez de Aguado (Serrano y Sanz 270 361-62)146

Todos estos escritos la mayoriacutea de ellos ignorados por el gran puacuteblico tienen la im-portancia de darnos una perspectiva diferente En otras palabras ensentildearnos la maacutes refinada sensibilidad de muchas mujeres que permanecieron y en su mayoriacutea siguen permaneciendo a laquooscurasraquo de una eacutepoca tan rica de la literatura espantildeola como fue el Siglo de Oro Este siglo fue tambieacuten en su dimensioacuten literaria y artiacutestica patrimonio de la mujer

146 Para profundizar en muchas de estas escritoras hispano-americanas la consulta de la Biblioteca Hispano-Americana de Beristain de Souza resulta de capital importancia

169ESPANtildeOLAS DE ULTRAMAR EN LA HISTORIA Y EN LA LITERATURA

Sor Nada ardores divinos de una monja adolescente escritos ineacutedi-tos de una recieacuten profesa del siglo XVI147

iexclQueacute encantadores son tus amores hermana miacutea espo-sa iexclQueacute deliciosos son tus amores maacutes que el vino Y el aroma de tus perfumes es mejor que el de los baacutelsamos Miel virgen destilan tus labios esposa miel y leche hay en tu lengua y el perfume de tus vestidos es como aroma de incienso (Cantar de los Cantares 4 10-11)

Sor Nada llamada asiacute por humildad seguacuten dice el Indice de manuscritos de la Biblio-teca Nacional de Madrid es uno de los ejemplos maacutes desconocidos e interesantes que tenemos de la poesiacutea y prosa amoroso-religiosa del siglo XVII Hasta la fecha nunca se habiacutea publicado su obra e incluso hasta el antildeo 1995 para mi sorpresa no habiacutea copias microfilmadas de sus manuscritos en la Biblioteca Nacional Serrano y Sanz en su libro Apuntes para una Biblioteca de Escritoras Espantildeolas hace una escueta y pasajera mencioacuten de esta mujer y de su obra (68-69) siendo eso todo lo que hasta ahora se sabiacutea de ella Sus escritos consisten en los siguientes manuscritos

1 laquoEn queacute consiste un verdadero amor de Diosraquo 9 hojas uacutetiles en 4ordm letra del siglo XVII Biblioteca Nacional de Espantildea Manuscrito 1295926

2 laquoPintura del Propio Amorraquo laquoPintura del propio Amorraquo 10 hojas uacutetiles en 4ordm letra del siglo XVII Biblioteca Nacional de Espantildea Manuscrito 1295927

3 laquoEsplicacioacuten sobre en queacute consiste la paz del Almaraquo laquoQuartillas aacute un Alma que padece soledad interiorraquo 7 hojas uacutetiles en 4ordm letra del siglo XVII Biblioteca Nacio-nal de Espantildea Manuscrito 1295828

En cuanto a su persona soacutelo se nos dice que laquose encubrioacute con este seudoacutenimo laquoSor Nadaraquo Esta monja desconocida de origen hispanoamericano posee toda la frescura e ingenuidad de una joven apasionada metida por vocacioacuten u obligacioacuten a ejercer la profesioacuten maacutes comuacuten para mujeres de cierta clase social de su tiempo En sus liacuteneas podemos encontrar un misticismo simple incluso en algunos momentos infantil pero a su vez lleno de una fuerza y sensualidad interior poco comuacuten en escritos de este geacute-nero que desborda los liacutemites del laquoamor divinoraquo a traveacutes de los diaacutelogos entre el Alma y el Esposo Sor Nada consigue proyectar su amor a Dios maacutes allaacute de una experiencia romaacutentica Su experiencia es sincera y genuinamente miacutestica trascendiendo la imita-cioacuten o la propia creacioacuten poeacutetica ficcionalizada (Hatzfeld 30) Algunos pasajes son de un

147 Veacutease mi artiacuteculo Sor Nada ardores divinos de una monja adolescente escritos ineacuteditos de una monja profesa del siglo XVIIraquo Espeacuteculo Revista de estudios literarios 26 (2004) 1-10 Universidad Complutense de Madrid http wwwucmesinfoespeculonumero26sornadahtml

170 JUAN FRANCISCO MAURA

alto contenido eroacutetico con sustantivos y metaacuteforas que recuerdan la maacutes iacutentima unioacuten amorosa en unos casos y el tierno amor maternal en otros

[T]e miro Jesus mio desnudo a las inclemencias del tiempo y ardien-do en puro fuego de Amor por la salud de las Almas y me ensentildeas a que te ame con todo mi corason y puresa de espiritu No atendiendo ni buscando umanos intereses ni a solisitar consuelos ni regalos espi-rituales que suelen empantildear la puresa del noble corason No mi Jesus amable pues antes me ensentildeaste tu puro Amor que desnudo sean [sic] de encaminar mis passos desde el pesebre asta la cuna en donde te miro tan desnudo como el pesebre y todo Sentildeor por mi Amor (Mss 12959 26 hoja 1 v)

El manuscrito (12959 27) de la mencionada serie de tres contiene algunas correccio-nes quizaacute hechas por el confesor o quizaacute por ella misma cuando se dirige con excesiva familiaridad y arrebatado fervor a su Amado148 He escogido el manuscrito (12959 Caja 28) en primer lugar por ser el ejemplo maacutes representativo de su poesiacutea y prosa En este manuscrito encontramos de forma maacutes directa que alegoacuterica toda la frescura de un diaacutelogo entre Jesuacutes y el alma que raya como diriacutea Cervantes laquoa la llana y sin rodeosraquo (667 lib 2 cap 38) con el doloroso y a veces desesperado deseo de la entrega y la unioacuten final con el Amado La ortografiacutea no ha sido corregida respetaacutendose el texto ori-ginal149 Veamos el siguiente fragmento

Mira que te amo con Amor de padre y con Amor de esposo el mas fino y puro enamorado que no tan solo me presio de darte mi mano sino tambien todo mi cuerpo y sangre para que con mi pan de vida te sustentes y te regales a tus anchuras y que con mi propio espiritu vivas en paz como tu lo deseas y que mis amores sean unico alivio en tus trabajos en esta mortal vida pues si esto es asi y sabes que muero por darte vida dime esposa mia de que te fatigas Dame querida tus bras-sos y dime si me amas como yo te amo (Hoja 4)

148 La antologiacutea de Promis ha procurado insertar entre los textos antoloacutegicos algunos que se refieren a la es-critura de mujeres fundamentalmente de aquellos generados en el interior de los espacios conventuales Estos textos se fundan como laquohistorias de vidasraquo y responden casi siempre a los requerimientos de los confesores de las monjas coloniales En este sentido resulta valiosiacutesima la incorporacioacuten de la llamada Relacioacuten autobiograacute-fica de Sor Ursula Suaacuterez como una muestra significativa de la escritura monjil entendida en esta eacutepoca (como tambieacuten en la tradicioacuten europea medieval) inserta en las denominadas laquolabores de manoraquo de las religiosas ya que el texto escrito por mandato se convertiacutea en una suerte de entramado o tejido linguumliacutestico es decir en un nuevo bordado que la mayor parte de las veces el confesor convertido en censor iba haciendo tachando y enmendando En la antologiacutea Promis agrega un texto de Sor Tadea Garciacutea de la Huerta titulado Relacioacuten de la inundacioacuten que hizo el riacuteo Mapocho de la ciudad de Santiago de Chile en el monasterio de Carmelitas titular de San Rafael el diacutea 16 de junio de 1783 se trata de un poema tipo romance escrito en versos octosilaacutebicos y que da cuenta de lo sucedido ese diacutea en el convento (Resentildea de la literatura del reino de Chile de Joseacute Promis Eddie Morales Pintildea httpwwwupaclpublicaciones2002literatura_promishtm)

149 Son frecuentes las faltas ortograacuteficas Una de ellas es el uso constante del seseo La ausencia de acentua-cioacuten y puntuacioacuten exceptuando alguacuten punto o coma arbitrario no seguido casi nunca de mayuacutescula inicial lo mismo que el uso igualmente aribitrario de la h o de b v r q g j m n x etc No olvidemos de la misma forma la laxitud linguumliacutestica existente en el siglo XVII (no sabemos a queacute parte de eacuteste pertenece el manuscrito) asiacute como la joven edad de la monja

171ESPANtildeOLAS DE ULTRAMAR EN LA HISTORIA Y EN LA LITERATURA

Los versos del presente manuscrito poseen la misma fuerza que tiene su prosa Con una estructura estroacutefica indefinida estaacuten aparentemente corregidos por alguien que tu-vo la oportunidad de conocer personalmente a la autora Muy probablemente se trate del padre al que hace referencia al principio del primer manuscrito laquoMandame el Pd que le declare en que consiste un verdadero amor a Diosraquo a continuacioacuten continuacutea con su caracteriacutestica humildad laquo[O]bedesere y dire lo q Dios me inspire segun mi rudesa y simplisidadraquo (Mss 12959 26) En cuanto a la fuerza pasional de esta joven observamos con cierta tristeza coacutemo aparece sublimada en sus escritos con toda la enegiacutea de una joven mujer llena de intensidad y vida pero encerrada en los liacutemites de un convento Veamos un ejemplo en donde responde el Alma en los siguientes versos

O mi enamorado Jesus O mi dulse y tierno amanteO alegria de los sielos O dulse Jesus amable

(Toda Sentildeor me derrito toda Sentildeor me desagoy quiero vivir por ti ea sentildeor abrasadme) [Tachado en el original]

Toda Sentildeor me derrito toda Sentildeor me desagoy quiero morir por vos ea Sentildeor que ya acabo

Ya tus amores me llaman ya tus perfumes me traencon suspiros y agonias Sentildeor hasta que te alcanse

O mi Jesus amoroso no puedo mas dilatarmeya la pasiensia me falta dulse Jesus abrasadme

(No puedo vivir sin vos no puedo mas dilatarmeya la pasiensia me falta dulse) [Tachado en el original]

No puedo vivir sin vos mi dulse Jesus amablepues me teneis echisada siendo mi esposo y mi Padre

Ay que me abraso Ay que me quemo del Amor deJesus nasareno como no tocan y tantildeen a fuego150

Estos versos llenos de arrebato sublimado conectan con toda la tradicioacuten miacutestica es-pantildeola que se remonta a Ramoacuten Llul y que culmina en el maacutes universal de nuestros

150 En toda la fuerza y simbologiacutea del amor maacutes iacutentimo del maacutes alto y sublime placer de la unioacuten de los amantes tal como lo encontramos en el Cantar de los Cantares y en San Juan de la Cruz Leemos en la Biblia

Ya me he quitado la tuacutenica iquestCoacutemo volver a vestirme Ya me he lavado los pies iquestCoacutemo volver a ensuciarlosMi amado metioacute su mano por el agujero (de la llave) y mis entrantildeas se estremecieron por eacutel Me levanteacute para abrir a mi amado Mis manos destilaron mirra y mis dedos mirra exquisita en el pestillo de la cerradura (5 3-5)

Nos ocurre lo mismo con San Juan de la Cruz en su insuperable poema laquoLlama de amor vivaraquo

iexclOh cauterio suaveiexclOh regalada llagaiexclOh mano blanda iexclOh toque delicadoque a vida eterna sabey toda deuda pagaMatando muerte en vida la has trocado

172 JUAN FRANCISCO MAURA

miacutesticos San Juan de la Cruz Esta tradicioacuten se extiende hasta finales del siglo XVII esto es hasta los finales del Barroco siendo un poco maacutes tardiacuteo en la Ameacuterica espantildeola Sin tener como propoacutesito discutir en el presente trabajo a queacute corriente miacutestica pertenece la obra de Sor Nada es necesario resaltar no obstante el hecho de que estaacute escrito por una mujer y ademaacutes de tierna edad El manuscrito 12959 Caja 26 termina con estas pa-labras laquo[T]odas estas boverias escrivi por entretenimiento siendo resien profesa en la religion Sor Nadaraquo Mas no por la juventud de su autora los escritos dejan de tener lo-gradas metaacuteforas imaacutegenes y siacutembolos sacados de la naturaleza La alegoriacutea de la unioacuten matrimonial poseeacute el fuego liacuterico de la maacutes apasionada de las relaciones amorosas vivi-ficada por perfumes flores insectos animales escarchas nieves o abrojos Por lo tanto aunque la narracioacuten destile cierta ingenuidad no carece por ello de un vocabulario rico con el sabor popular de la poesiacutea de los cancioneros y romances de tradicioacuten renacen-tista No ha sido otra mi intencioacuten que la de rescatar del olvido unos escritos en prosa y en verso llenos de frescura y espontaneidad que nos muestran la pasioacuten con que la joven novicia se laquoentrega en cuerpo y almaraquo a los menesteres de su profesioacuten guiada por un padre espiritual en esos primeros antildeos de formacioacuten Esta ha sido la razoacuten por la que presento a continuacioacuten el citado manuscrito en su totalidad

Sor Nada (Mss 1295928)

laquoEsplicacion sobre en que consiste la paz del AlmaraquolaquoQuartillas a un Alma que padece soledad interiorraquo

[7 hojas utiles en 4ordm letra del siglo XVII]

+

Esplicacion sobre en que consiste la paz del Alma

Pareseme segun mi rudo entender que la verdadera paz del Alma con-siste en una muy pura y buena consiencia en un corason liso y bien intensionado en una verdadera rectitud de espiritu en el qual el Alma procura bolar a Dios sin jamas detenerse a respetos umanos ni reparar en que me diran ni de que me censuraran sino me apresuro a seguir a unos entenderes y pareseres dorados en los quales pretende el mundo engantildear y ensuciar si se puede la puresa de un corason unicamente de Dios y de su Santa ley y se lo conserva cristalino con la divina asis-tencia de la gracia y comprendido de su Amor y temor siguiendo la luz divina de tan amante Sentildeor Dios y ombre verdadero con que este ilustrado corason ni se altera ni se mueve por los disfrasses dorados que ase el mundo y sus moradores mayormente con falssas amistades aunque con ellos muestre buena intension Con la misma grasia y luz de Dios conose el buen corason estos disfrasses que le ase el mundo y se retira de todo con espiritu y valor esto sin la menor alterasion sino que en suma paz se retira a buscar a Dios dentro de su mismo corason

173ESPANtildeOLAS DE ULTRAMAR EN LA HISTORIA Y EN LA LITERATURA

y se abrasa con su pura verdad en la qual se le descubren mil interio-res secretos tan solidos puros y verdaderos que la misma Alma queda abismada y de puro grandes no los puede bien comprender ni esplicar pero estos mismos secretos divinos le sirven de espuelas para no solo correr sino bolar con pies de plumas en seguimiento de su bien ama-do Jesus y como este soberano Sentildeor es tan amante de sus espossas las Almas luego que la ve bolar con pies de plumas la sale al encuen-tro en despoblado campo que se deve de llamar Campo de Amor de Dios y el mismo Sentildeor se viene a las manos por ser Dios que nos ama con Amor infinito de Padre benigno y amoroso con que asiendose en contra deso este divino enamorado en lo interyor de el Alma que le busca con ansias de servirle y amarle y en aquella soledad traban una conversasion amorosa y sensilla como la pluma simple de quien esto escrive

Divino enquentroDios y el Alma en la soledad

O Soberano Principe de la paz dise el Alma tus perfumes me traen a ti bolando porque alla en el mundo y sus valedores me pretendian engantildear y entretenerme con pegaminossas amistades que facilmen-te me pudieran envenenar y matarme apartandome de ti Mi dulse Jesus amable mi Redentor Soberano que con tantas ansias me sales al enquentro como siervo [ciervo] erido de mis Amores los quales tu Amor me ofrese para que con tu mismo Amor te ame y te sirva en paz sin perturbarme ni contristarme ni cansarme de padeser pasando si se ofrese por escarchas nieves espinas ni abrojos ni por otros diverssos trabajos ni piedras de contradision que tu me puedes permitir pues por mas que el mar se levante con sus ferosses olas contra mi ni piedras se me tiren al rostro en todo Sentildeor me quieres con serenidad pasifica sin la menor perturbasion Todo Sentildeor quieres que lo tome con Serenidad de espiritu y asi vengo a ti bolando para que mejor me ensentildees a vivir segun las leyes de tu noble condision que me son muy agradables por mas que el mundo me las despresie por segir sus vanidades y torsidas intensiones con apariensias de bien y con este engantildeo y bien me quie-ro mas a mi que no a mi proximo veo que segun mi pareser se pierden muchas Almas y tambien de aquellos que se depresian y pasan por muy espirituales Con que me paresen pocos los que llegan a padeser con desnudes151 de espiritu por tu purisimo Amor y me parese essas se quedan muy atrasadas en la virtud por el peligro de bolver muy atras el paso de modo que se pueden despentildear y pereser en su misma desgra-sia ya por soberbia o por otras enfermedades que se les pega al corason y asi lo pasan como siegos ignorantes sin advertir en sus peligros

151 La letra en cursiva es miacutea

174 JUAN FRANCISCO MAURA

este aquerdo Sentildeor y otros que tu verdad me ensentildea me ase venir uyendo de las paredes del mundo y me vengo a ti Dios mio bolando con las dos Alas del Amor y temor que tu mismo Amor me ofrese tan de gracia y tan de grado que no se duentildeo mio con que lo responder a tan soberano beneficio y finesa de tus entrantildeas de Amorvengo Sentildeor y esposo mio unicamente a descansar en ti pues los peli-gros del camino me an puesto en mucho sobresalto temiendo el per-derte y sin ti perderme para siempre por una eternidad sin fin pues deseo amado mio ganarme ganandote a ti y vivir en ti aora en vida y despues eternamente y estos cuidados me traen fatigada molida y cansada y no podre tener alivio y descanso sino viendome entre tus brassos aunque sea estando en cruz pues ese es el fin de mis deseos vivir y morir en ti ablame mi cordero manso y ensentildeame a que ver-daderamente te ame como fiel esposa ea mi caro amigo dame la ma-no pues sabes Amor mio que en mi no ay mano sin tu misma mano y asi mi Dios y Sentildeor mi Principe Soberano con umilde rendimiento y deseos de alcansarte te suplico me des la mano y me consueles en estos mis trabajos Deseo Sentildeor vivir en paz y los malos amores de mi Naturaleza flaca no me dejan detentar y no quieren por mi desgrasia atropellar con las leyes de tu Amor ni quisiera perturbar mi corason quando me veo con un torvellino de olas y contratiempos que a menu-do me suelen sercar pero si tu Sentildeor me das la mano nada temo sino que me aseguro y vivire en paz sin que me fatiguen los contratiempos pues mi mano en la tuya y mi espiritu en el tuyo por mas borrascas que me envistan no seran bastantes para rendir mi voluntad a la suya bien si para pronunsiar un fiat que resuene bien atras en tus oidos y que en medio de mis fatigas me ponga a cantar tus divinas misericor-dias hea Sentildeor ya pretendo serrar mis labios por no desir mas bove-rias y deseo Sentildeor oir tus palabras de vida eterna abla Sentildeor que tu sierva oye con atension y cuydado mira mi Dios que se me ase tarde y espero con prisa deseando saborearme y aprovecharme de los ecos de tu Santa dotrina pues todas tus palabras saben a eterna vida callen pues mis sentidos y potensias y todo se ponga en paz pues mi dulse y soberano Sentildeor no se escusara de ablar me aun que en mudo silensio hea mi gran Prinsipe de la paz ablame que tus puros amores me traen perdida por estos asperos montes y mis cortos pasos no te pueden dar alcanse mirame mi Dios a tus pies postrada como un vil gusano y me-nor ormiga de la tierraabla Jesus y dise a su esposa el Alma querida esposa mia que me pides y por que te muestras tan fatigada y mal sufrida no vives como corde-rita del campo buscando de mis pechos el sustancial pasto mi Amor no te sustenta y mi grasia te promete eterna vida pues dime amada de que te fatigas y te muestras mal sufrida mira que te amo con Amor de padre y con Amor de esposo el mas fino y puro enamorado que no tan solo me presio de darte mi mano sino tambien todo mi cuerpo y

175ESPANtildeOLAS DE ULTRAMAR EN LA HISTORIA Y EN LA LITERATURA

sangre para que con mi pan de vida te sustentes y te regales a tus an-churas y que con mi propio espiritu vivas en paz como tu lo deseas y que mis amores sean unico alivio en tus trabajos en esta mortal vida pues si esto es asi y sabes que muero por darte vida dime esposa mia de que te fatigas Dame querida tus brassos y dime si me amas como yo te amoResponde el Alma152 Tu mi Dios sabes si yo te amo pues de mi solo se que mis deseos y ansias buelan a ti mas no alcanso a saber si te amo como tu de-seas ser amado y como desconfio tanto de mi y de mis prosederes falssos temo Dios mio perderme y perderte y asi Sentildeor pues no desechas mis Amores y te muestras tan fino en amarme te pido me ensentildees a vivir segun las leyes de tu pura verdad y fina condisionhija mia dise Dios la prueva de un verdadero Amor consiste en sufrir callar y padeser por mi unico Amor y en todo seguir mis pasos sin ja-mas retroseder por mas fragoso que se muestre el camino pues nunca seran tantas las espinas las escarchas ni las nieves ni los vientos bo-rrascosos que te se ofrescan pasar por mi Amor como los que mi tierno y desinteresado Amor paso por ti y siempre con mis pies descalssos y asi hija y esposa mia muestrate costante en seguir lo perfecto de mis passos pues mi braso fuerte sera en ti y peleara por ti y te sera el todo en tus nesesidades y mi Amor te convertira en dulse y suave lo amargo y molesto a la condision de la carrne

Responde el Alma

O mi enamorado Jesus O mi dulse y tierno amanteO alegria de los sielos O dulse Jesus amable

(Toda Sentildeor me derrito toda Sentildeor me desagoy quiero vivir por ti ea sentildeor abrasadme) [Tachado en el original]

Toda Sentildeor me derrito toda Sentildeor me desagoy quiero morir por vos ea Sentildeor que ya acabo

Ya tus amores me llaman ya tus perfumes me traencon suspiros y agonias Sentildeor asta que te alcanse

O mi Jesus amoroso no puedo mas dilatarmeya la pasiensia me falta dulse Jesus abrasadme

(No puedo vivir sin vos no puedo mas dilatarmeya la pasiensia me falta dulse) [Tachado en el original]

No puedo vivir sin vos mi dulse Jesus amablepues me teneis echisada siendo mi esposo y mi Padre

152 La aparicioacuten de una mayuacutescula al principio de una oracioacuten es algo totalmente arbitrario en este ma-nuscrito dada la libertad ortograacutefica de la autora Como se puede observar en la mayor parte de las veces no es el caso

176 JUAN FRANCISCO MAURA

Ay que me abraso Ay que me quemo del Amor deJesus nasareno como no tocan y tantildeen a fuego

Responde Jesus Hija mia tus simples vozes oygo y aunque resuenan bien a mis oidos pero te deseo mas mansa y pasifica en tus fervores ya sabes que no siempre as de vivir en mantillas ni a los pechos de tu Madre por que es rason que padescas con espiritu fuerte como mu-jer valerosa por que a una esposa del Rey soberano y prinsipe de la paz no le estan bien chiquerias ni fervores de nintildea malcriada y ya es ora que la destete su Madre la Naturaleza y que empesando su nueva vida camine con el favor de mi grasia sigiendo mis passos de eterna vida esto con sus pies descalssos segun mis leyes de Amor puro y desinteresado lo tienen ordenado153 y vivir en paz como lo deje en-cargado a mis apostoles Santos repitiendoles varias vezes Vivir en pas y caridad esto es un vivir en Dios y Dios en el Alma y asi hija mia el Alma que vive en paz vive en mi Como mis cortesanos en el cielo y pues me pides que te ensentildee a vivir segun las leyes de mi condision Repito el desir que te debes mostrar sufrida en todo tiempo y estado sin permitir en tu corason que ni aun los fervores se adelanten con estremos ni ademanes sino atiende y aprende de mi purisima Madre pues siempre la veras si bien lo consideras que mientras vivio en el mundo en todos sus trabajos se mostro firme fuerte costante como piedra diamante Pues mirandome nintildeo entre sus brasos desnudo en el pesebre desnudo y crusificado en los brassos de una cruz En estos y otros passos no se mudo su rostro sino que en suma serenidad y pasifico corason toda se sacrificaba enteramente en los brassos de mi Amor y rendido su corason y voluntad en la de mi eterno Padre por ejemplo te la doy y deseo que aprendas de sus nobles calidades pues te aseguro carisima que las leyes de mi condision y pura verdad todo lo allaras enserrado en el corason de mi purisima Madre sedle fiel y descansaras en paz

+

Quartillas a un alma que padese soledad interior

1Un Alma afligida y tristese ve en un campo desiertay en el su esposo la tieneAtormentada y sedienta

153 Es a traveacutes de estas liacuteneas lo que hace suponer que la autora de este diaacutelogo amoroso entre el Alma y Je-suacutes es novicia esto es laquoque estaacute empesando su nueva vidaraquo En las mismas liacuteneas una vez maacutes se hace alusioacuten al laquodesteteraquo de su vida civil laquoa una esposa del Rey soberano y principe de la paz no le estan bien chiquerias ni fervores de nintildea malcriada y ya es ora que la destete su Madre la naturalesaraquo (fol 5)

177ESPANtildeOLAS DE ULTRAMAR EN LA HISTORIA Y EN LA LITERATURA

2Pendiente se ve en el AyreSolo un hilo la sustentasin tocar el pie en el sueloporque del no tome tierra

3Mirandola esta yto a ytoaquel sol que la atraviesay la enviste con sus rayosmas ella no pestantildeea

4Como sigarra padese y como a tal se atormentabatiendo sus mismas Alasy el corason se atraviesa

5Con penas sustos temoresquando se mira assi mesmasin tener valor en nadaporque es la misma flaquesa

6Pero el Amor de su esposotoda su atension le llevay la pone en un abismopero cubierto en tiniebla

7Desea dar algun bueloy subir con ligeresapero se mira travadacon una fuerte cadena

8Clama suspira y padeseMas del todo se sujetaRindiendo su voluntadA la divina clemencia

9Los enemigos del AlmaCruelmente le asen guerray ella aunque firme y constantelos reselos la atormentan

178 JUAN FRANCISCO MAURA

10de todos modos padeseaunque gosa la asistensiadel divino esposo amadoque en su interior se recrea

11Solo de verla penary con verla tan serenadise resibe mil gustosde su sigarra pequentildea

12Le sabe el mundo a mil yelesy su trato le atormentaviendo en el mil falsedadesque todas saben a tierra

13Para poderse librardeja de correr y buelacon las Alas del Amory el mismo Amor se la lleva

Una vida dedicada a un amor divino un amor que le haraacute llenar un buen nuacutemero de cuartillas dedicadas a tan alta empresa Se desconoce si la vocacioacuten de Sor Nada con-tinuoacute con tanta intensidad el resto de sus diacuteas Ciertamente la vida en el covento no era faacutecil En algunos casos la experiencia era traumaacutetica incluso fatal para algunas de las adolescentes de la Ameacuterica Espantildeola Las reglas del claustro eran severas por varias razones Estas joacutevenes si no teniacutean el permiso de la superiora no podiacutean recibir visitas no podiacutean volver a sus casas su correspondencia era censuraba y no podiacutean salir del periacutemetro conventual Igualmente se levantaban antes del amanecer para oir misa tra-bajaban el resto del diacutea y lo maacutes interesante es que muchas veces esta vida era aceptada por muchas

Page 23: Tercera parte: Mujeres en la vida intelectual - …parnaseo.uv.es/Editorial/Maura/TerceraParte.pdf · La Biblia, por su parte, hace repetidas menciones de la mujer y sobre el comporta-

153ESPANtildeOLAS DE ULTRAMAR EN LA HISTORIA Y EN LA LITERATURA

rie de alicientes137 sobre todo si eacutestas estaban casadas pasaje para llevar a las familias franquicia de derecho para los artiacuteculos que portasen consigo favoritismo en cargos destinos y contrataciones a aquellos que pasasen con sus mujeres incluyendo ademaacutes de los castellanos y leoneses a suacutebditos de otras partes de la corona incluso genoveses y portugueses si estos veniacutean acompantildeados de sus consortes (Fernaacutendez Duro 15-16)

Incluso se llegoacute a imponer penas a aquellos hombres casados que no llevasen a sus mujeres con ellos a Indias en el teacutermino de un antildeo El mismo emperador en una ceacutedula otorgada al virrey de la Nueva Espantildea le recomendaba que laquoprocurase persuadir a ca-sarse a los solteros que estuviesen en edad y situacioacuten de hacerloraquo prometieacutendoles que al efectuar el matrimonio seriacutean preferidos en el reparto de indios En la isla de San Juan de Puerto Rico los cargos oficiales y oficios puacuteblicos debiacutean de ser desempentildeados por los casados en primer lugar En Meacutexico ocurrioacute lo mismo con los cargos de corregido-res (Konetzke laquoemigracioacutenraquo 140-41) Felipe II al igual que sus antecesores y sucesores reiteraraacute y justificaraacute los beneficios de los que seraacuten acreedores aquellos que tengan allaacute a sus mujeres laquoque los que han servido en los descubrimientos de las dichas Indias y tambieacuten los que ayudan a la poblacioacuten dellas que tienen allaacute sus mugeres sean preferi-dos en los aprouechamientos qualesquierraquo mandando que despueacutes de los conquistado-res se tuviera en cuenta para la laquoprovisioacuten de los corregimientosraquo a los colonos casados siempre que estuvieran capacitados para dichos cargos (Konetzke laquoemigracioacutenraquo 141)

Las disposiciones en favor del matrimonio son claras ya sea por medio de un favo-ritismo manifiesto como en los casos antes citados o mediante medidas de cohercioacuten para que esta poliacutetica se llevase a cabo Don Sebastiaacuten Ramiacuterez de Fuenleal obispo de Santo Domingo y presidente de la Audiencia de Meacutexico propuso que a aquellos enco-menderos que no estuviesen casados y que no hubiesen tomado parte en la conquista se les quitase los indios concedidos con la obligacioacuten de devolveacuterselos si en el plazo de un antildeo habiacutean contraiacutedo matrimonio (Konetzke laquoemigracioacutenraquo 142-43) Por supuesto hubo excepciones a estas reglas En algunos casos ni la mujer teniacutea especial intereacutes en vivir junto con su marido en las Ameacutericas ni el marido queriacutea ir a buscar a su mujer pasado el plazo de un antildeo En el presente documento y de forma excepcional las auto-ridades reales protegen a los conyuges para que puedan seguir viviendo separados en continentes diferentes

Nuestras justicias de la ysla de Cubagua e otras qualesquier de las nuestras Yndias yslas e tierra firme del mar oceacuteano e a cada uno e qualquier de vos a quieacuten esta mi ceacutedula fuese mostrada por parte de Alonso de Tapia nuestro veedor de la provincia de Paria me ha sido hecha relacioacuten que ha mucho tiempo que reside en esas partes donde nos ha servido en lo que se ha ofrecido e que agora vos otros le apre-miaacuteis a que venga o embiacutee a estos Reinos por su muger lo cual no puede al presente hazer a causa de no ter posibilidad para ello a mi me ha suplicado vos mandase que no le compeliacuteesedes ny apremiaacutesedes a que viniese o enviase por la dicha su muger y dieacutesedes por libres los fiadores que tenyades para que dentro de un antildeo embiariacutea o verniacutea por

137 Reales Ceacutedulas de los antildeos 1502 y 1503 Academia de la Historia Coleccioacuten Muntildeoz tomo 75 fols 209 y 220 citado por Fernaacutendez Duro 15

154 JUAN FRANCISCO MAURA

ella o como la mi merced fuese lo cual visto por los de nuestro consejo juntamente con una peticioacuten presentada por dontildea Mariacutea Gudiel muger del dicho Alonso de Tapia por la cual nos suplica lo mismo que acor-dado que debiacutea mandar esta mi ceacutedula para vos por la qual vos mando que no compelaacuteis ni apremieacuteis al dicho Alonso de Tapia a que venga ni enviacutee a estos reinos por la dicha su muger si no fuere a que la pro-vea de lo que fuere necesario para su mantenimiento y deys por libres quales quier fianzas que sobre ello haya dado e no fagades ende al por alguna manera Firmado en la villa de Valladolid a VII diacuteas del mes de febrero de mil e quinientos e treinta y siete antildeos yo el licenciado Con-de de Samano y sentildealada del cardenal Beltraacuten y Carbajal [Aparte en letra pequentildea] Este diacutea se despachoacute una provisioacuten por la cuaacutel su Mag hizo merced a Alonso de Tapia de la veedoriacutea de la provincia de Paria por muerte de Garciacutea de Aguilar con las clausulas ordinarias y con el mismo salario que teniacutea Aguilar Firmado del emperador y de Beltraacuten y Bernal y Velaacutezquez El Rey (Registro de disposiciones Riacuteo Marantildeoacuten AGI Indiferente General Legajo 416 libro 2 Fols 94v y 95r)

El punto maacutes interesante a destacar de todas estas disposiciones oficiales en cuanto a la emigracioacuten femenina al Nuevo Mundo no es otro que la libertad que se da a la mujer de decidir si quiere o no casada o sin casar trasladarse al nuevo continente no como una imposicioacuten sino como un precepto laquoel espiacuteritu de las disposiciones en el sentido de asegurar la vida marital de los casados significa que la mujer que su marido invita a pa-sar a las Indias puede negarseraquo (Villafantildee 127) Habriacutea que ver las opciones laquorealesraquo ade-maacutes de las legales y econoacutemicas que le quedaban a la mujer si tomaba esta decisioacuten

El saber la libertad de eleccioacuten que estas mujeres teniacutean de antemano antes de aden-trarse en las interminables penalidades y aventuras que los viajes de la navegacioacuten tran-soceaacutenica suponiacutean hace que sus hechos y esfuerzos cobren auacuten maacutes relieve En nume-rosas ocasiones estas mujeres cruzaron el oceacuteano una y maacutes veces sin otro motivo que el de defender los derechos e intereses de los suyos Lo que resulta maacutes valioso de todo esto es que lo hicieran por propia iniciativa arriesgando sus vidas para que se hiciese justicia y para que no les faltase lo necesario a aquellos que estaban en la otra orilla Las autoridades vigentes conocedoras de los vaciacuteos legales existentes en las nuevas colo-nias se apresuraron a poner en vigor aquellas normas que redundaran en el beneficio de los menos favorecidos por las circunstancias La institucioacuten del matrimonio cuya trans-cendencia es fundamental en la vida juriacutedica y social de la mujer tuvo que ser legislada en Ameacuterica con una serie de nuevas disposiciones agregados modificaciones y aclara-ciones Asiacute pues la legislacioacuten de base espantildeola tuvo que sufrir en tierras americanas esta serie de cambios por motivos poliacuteticos y sociales (Villafantildee 126)

Para hacer un sumario de lo dispuesto hasta el siglo XVI en cuanto a la legislacioacuten de las mujeres que teniacutean familia o intereses en Indias merece la pena mencionar que existieron una serie de disposiciones que protegiacutean a las mujeres para que eacutestas no se viesen abandonadas por sus maridos En un epiacutegrafe de la Recopilacioacuten de 1680 (libro VII tiacutetulo 3) se deja ver claramente la preocupacioacuten de las autoridades en este asunto laquoDe los casados en Espantildea e Indias que estaacuten ausentes de sus mujeres y esposasraquo (Vi-llafantildee 126-27)

155ESPANtildeOLAS DE ULTRAMAR EN LA HISTORIA Y EN LA LITERATURA

La lista de disposiciones se hace interminable En los reinados de Fernando el Catoacute-lico Carlos V Felipe II Felipe III o incluso Carlos II la insistencia es constante La ra-zoacuten de esta insistencia seriacutea bastante obvia dado que con un oceacuteano por medio seriacutean muchos los que se aprovechasen de llevar una doble vida marital sin el estricto control y vigilancia de sus mujeres que se encontraban en la peniacutensula La ley XXVII libro IX tiacutetulo XXVI determina laquoDeclaramos por personas prohibidas para embarcarse y pasar a las Indias todos los casados y desposados en estos reinos lsquosino llevaren con ellos sus mujeresrsquo aunque sean virreyes oidores gobernadores o nos fuesen a servir en cual-quier cargo y oficios de Guerra Justicia y Hacienda porque es nuestra voluntad que todos los susodichos lleven a sus mujeresraquo (Villafantildee 127) laquoLos eclesiaacutesticos eran los en-cargados de dar cuenta a los tribunales competentes de aquellos que estando casados permaneciacutean en Indias sin sus mujeres Son reiteradas las disposiciones de Fernando el Catoacutelico en este sentidoraquo138 En 1514 el rey don Fernando ordena en una provisioacuten para la isla Espantildeola laquodoy licencia eacute facultad aacute cualquier persona naturales de estos Reynos para libremente se puedan casar con mujeres naturales de esa dicha ysla sin tener que incurrir por ello en pena algunaraquo (Villafantildee 129)

No se debe olvidar tampoco a aquellas mujeres que decidieron pasar a las laquonuevas tierrasraquo solteras Estas mujeres tambieacuten tuvieron un papel importante en el desarrollo de las nuevas colonias Los organismos espantildeoles del momento como los mandatarios indianos y todos los cronistas no dejaron pasar desapercibida la importancia social de estas mujeres en la poliacutetica de poblamiento laquo[E]s cierto que los pueblos de Indias nuevamente poblados no se tienen por fijos o estables ni permanentes hasta tanto que mujeres espantildeolas entren en ellos y los encomenderos y conquistadores se casen por muchas causas y respetos buenos y saludables que para ello hayraquo (Villafantildee 126-27)

Si la intencioacuten era la de una presencia permanente en las tierras americanas la mujer soltera que pasase a ellas siempre seriacutea un motivo maacutes para el colono o conquistador de continuar en el mismo suelo Se podriacutea empezar una familia si asiacute se quisiese sin tener que pensar en volver a la metroacutepoli ya fuese a disfrutar de los bienes adquiridos o a laquobuscarraquo una esposa El problema aparecioacute cuando se produjo un exceso de mujeres solteras lo que de alguna manera alteroacute la estructura social existente ya que no habiacutea muchas opciones para ellas aparte del matrimonio o el convento

En consideracioacuten a que la experiencia habiacutea demostrado que un exce-sivo nuacutemero de mujeres ejerciacutea perniciosa influencia sobre la moral y las costumbres se suplicaba al rey no otorgase a aquellas tantas auto-rizaciones para emigrar al Peruacute La ciudad de la Plata fundada en 1538 emite en 1577 un informe en el que se expone la urgente necesidad de que se funde un convento de monjas pues en el territorio de las Au-diencias de Los Charcas existiacutea un gran nuacutemero de muchachas que no pudieacutendose casar se hallaban en gran peligro de perderse (Konetzke laquoemigracioacutenraquo 149)

138 Solorzano Pereira Juan de Libro Primero de la Recopilacioacuten de las Ceacutedulas Reales Cartas y Provisiones y Or-denanzas Reales Noticia preliminar de Ricardo Levenne Universidad de Buenos Aires Facultad de Derecho Y Ciencias Sociales Pub del Instituto de Historia del Derecho Argentino Coleccioacuten de Textos y Documentos para la Historia del Derecho Argentino t V Buenos Aires Imp de la Universidad de Buenos Aires 1945 (Li-bro I Ley 10 laquoQue los Espantildeoles puedan casar con Indias y al contrario a su voluntadraquo t2 p 138 citado en Villafantildee 129

156 JUAN FRANCISCO MAURA

Entristece ver coacutemo se manejan las cifras de estas mujeres como si de ganado o de bienes suntuarios se tratase Por otra parte existieron irregularidades como la de pobla-doras espantildeolas que vivieron amancebadas con hombres que ya estaban casados en la peniacutensula Normalmente esto ocurriacutea cuando la estancia del conquistador se prolonga-ba maacutes de lo debido en lugares donde habiacutea pocas espantildeolas Muchas veces nacieron hijos de estas uniones que hicieron auacuten maacutes difiacutecil la situacioacuten para las mujeres que esperaban en Espantildea a un marido que ya no teniacutea ningunas intenciones de volver En los juicios de residencia los documentos acostumbran a citar estos casos ya que era parte de su obligacioacuten castigar las irregularidades extramatrimoniales y salvaguardar las buenas costumbres familiares que con tanto intereacutes se deseaba mantener laquoUn ejemplo nos lo da la isla de Cuba donde en 1532 viven con hombres casados Olalla Hernaacuten-dez Santillana Aranda lsquola Cordobesarsquo Catalina de Leoacuten Catalina Saacutenchez Francisca Hernaacutendez Mayor de Azebedo Juana de Valeros y lsquouna mujer que estaba en casa de Ayalarsquoraquo (Borges 416)

Estos casos no fueron aislados y mucho menos en Cuba centro neuraacutelgico de todo el movimiento de ida y vuelta entre la metroacutepoli y el Nuevo Mundo Estas ocho acusa-ciones por lo tanto no tienen porqueacute considerarse extraordinarias y menos en el lugar maacutes cosmopolita de las Indias en esos momentos al que llegaban flotas a cada momen-to Al parecer existieron casos parecidos en el Riacuteo de la Plata Peruacute y Nueva Espantildea (Ratcliffe 347) El margen legal para que estas mujeres viviesen como quisiesen estuvo limitado por una moral que veiacutea uacutenicamente en el matrimonio o el convento una salida laquovaacutelidaraquo para que fueran aceptadas socialmente Los hombres en iguales circunstan-cias fueron juzgados por una laquomoralraquo mucho maacutes permisiva

La mujer y el cuerpo eclesiaacutestico

Pues iquestquieacuten diablos os traiacutedo aquiacute dijo don Quijote siendo hombre de la iglesia iquestQuieacuten sentildeor replicoacute el caiacutedo laquomi desventuraraquo Pues otra mayor os amenaza dijo don Quijote sino me satisfaceacuteis a todo cuanto primero os pregunteacute (Cervantes Don Quijote )

Otro factor a tener en cuenta en un anaacutelisis sobre la presencia de la mujer en el Nuevo Mundo es el que tiene que ver con la institucioacuten maacutes importante de las que llegaron desde Europa la iglesia catoacutelica Sin aacutenimo de criticar a tan compleja institucioacuten res-ponsable de gran parte de los aconteceres en el Nuevo Mundo vale la pena analizar algunas singularidades Muchos de sus miembros fueron grandes ejemplos de valor e inteligencia a la hora de tratar los maacutes variados y escabrosos asuntos con los que se encontraron los cristianos en la otra orilla durante este periacuteodo Se debe resaltar tam-

157ESPANtildeOLAS DE ULTRAMAR EN LA HISTORIA Y EN LA LITERATURA

bieacuten su caraacutecter medieval en la manera de hacer apostolado y de entender y tratar a los potenciales cristianos Si se tienen en cuenta los privilegios y prerrogativas que algunas de las altas jerarquiacuteas eclesiaacutesticas tuvieron no seriacutea superfluo estimar que un respeta-ble porcentaje de la poblacioacuten de origen laquodudosoraquo muy bien podiacutea venir de la misma iglesia Fueron muchas las viacutectimas y muchas las familias divididas por un padre laquoinvi-sibleraquo Gran parte de los hijos o laquosobrinosraquo de estos sacerdotes pasaron a ocupar cargos similares incluyendo los privilegios que estos cargos llevaban consigo como si se trata-se de cualquier otro oficio gremial transmitido generacionalmente regla tan comuacuten en la Europa medieval Todaviacutea a finales del siglo XIII en Espantildea los derechos de los hijos y nietos de los sacerdotes estaban protegidos por la ley sin que hubiesen podido ser erradicados por las reformas gregorianas (Ratcliffe 347)139

Las letras espantildeolas ya se haciacutean eco de estos lances amorosos entre representantes de la Iglesia y ciertas damas del lugar desde los tiempos del poeta riojano Gonzalo de Berceo En su obra maacutes conocida Los milagros de Nuestra Sentildeora Berceo describe con un realismo ingenuo y sencillo relatos de humor y de humanismo sobre aquellos hombres de carne y hueso que eran perdonados por la intercesioacuten de la Virgen Mariacutea Juan Ruiz por su lado haraacute de su Libro de buen amor la obra maacutes representativa en este sentido Seriacutea prolijo recordar la actuacioacuten de la Iglesia durante diversos periacuteodos de la Edad Media no soacutelo en Espantildea sino en toda Europa En la Espantildea musulmana del siglo XII concretamente en Sevilla el comportamiento de los representantes de la iglesia cristia-na (mozaacuterabe) en territorio islaacutemico es duramente criticado por el sevillano Ibn Abdun Este precioso documento muestra el estricto control y falta de confianza que existiacutea sobre la mujer prohibieacutendolas que entrasen en las laquoabominablesraquo iglesias cristianas

porque los cleacuterigos [cristianos] son libertinos fornicadores y sodomi-tas Asimismo debe prohibirse a las mujeres francas que entren en la iglesia maacutes que en diacuteas de funcioacuten o fiesta porque alliacute comen beben y fornican con los cleacuterigos y no hay uno de ellos que no tenga dos o maacutes de estas mujeres con que acostarse Han tomado esta costumbre por haber declarado iliacutecito lo liacutecito y viceversa Convendriacutea pues mandar a los cleacuterigos que se casasen como ocurre en Oriente y que si quie-ren lo hagan (Leacutevi-Provenccedilal 150)

Pese a existir una convivencia paciacutefica durante gran parte de la Edad Media entre los tres credos monoteiacutestas de Espantildea (cristianos musulmanes y judiacuteos) esto no suponiacutea que no existiese desprecio y desconfianza entre estos grupos religiosos Dice Abdun resaltando el peligro que suponiacutea que una mujer entrase en casa de un cleacuterigo cristiano de vida ceacutelibe

No debe tolerarse que haya mujer sea vieja o no en casa de un cleacuterigo mientras eacuteste rehuacutese casarse Obliacutegueseles ademaacutes a circuncidarse co-mo les obligoacute al-Mutadid pues si a lo que dicen siguen el ejemplo de Jesuacutes (iexclDios les bendiga y salve) Jesuacutes se circuncidoacute y precisamente ellos que han abandonado esta praacutectica tienen una fiesta que celebran solemnemente el diacutea de su circuncisioacuten (Leacutevi-Provenccedilal 150-151)

139 Valdriacutea la pena ver si han cambiado mucho las cosas desde hace quinientos antildeos a esta parte o si in-cluso la iglesia moderna ha retrocedido en tolerancia en cuanto a las relaciones sexuales de los representantes de la Iglesia

158 JUAN FRANCISCO MAURA

El historiador argentino Germaacuten Arciniegas recoge un pasaje ilustrativo de lo men-cionado anteriormente pero trasladado al ambiente de la colonia diciendo que incluso en poblaciones pequentildeas como Santa Fe con poco maacutes de un convento y una ermita la fragilidad de la carne enredaba a frailes soldados y virreyes por igual laquoEl buen So-liacutes que murioacute en olor de santidad con la cabeza reclinada sobre un par de ladrillos y en saya de franciscano cruzaba en las noches el solar de su palacio para ir a besar a la Marichuelaraquo (118-19)

Arciniegas recoge tambieacuten un suceso aparecido en el diario de Lima en 1667 que no tuvo que ser extraordinario durante los primeros antildeos de la colonia laquoEl fraile carmelita mdashGrande hereje y siendo sacerdote deciacutea misa gran perro lujurioso deshonesto que relatando sus maldades dijo que en cierta ciudad habiacutea conocido carnalmente a maacutes de trescientas y sesenta mujeres y en un convento de monjas habiacutea cometido muchos sacrilegios Este lo trujeron preso de Buenos Aires por Chileraquo (119)

Las controversias de la iglesia moderna sobre las relaciones que los eclesiaacutesticos de-ben tener con el sexo femenino parece que no han encontrado todaviacutea respuesta Sigue existiendo miedo y recelo a que la mujer comparta no soacutelo poder en la jerarquiacutea de la iglesiacutea sino en la vida privada de los miembros de la institucioacuten En la Nueva Espantildea el primer obispo de Meacutexico Juan de Zumaacuterraga viendo en la mujer un ser de tentacioacuten irresistible prohibioacute terminantemente la presencia de eacutestas en su casa Ni siquiera para su limpieza y aseo El franciscano Juan de Torquemada se refiere a este comportamien-to como una de las virtudes del popular obispo

Fue este benditiacutesimo prelado muy amigo de la virtud y de virtuosos y aceacuterrimo reprehendedor de vicios y viciosos y tan enemigo de la ociosidad que no permitiriacutea que alguno de su casa estuviese ocioso fue amiciacutesimo de la limpieza por lo cual jamaacutes consintioacute que mujer alguna entrase en su casa aunque fuese necesaria al servicio de ella ni nunca consintioacute que por alguna ocasioacuten subiese mujer a lo alto y aposentos de ella antes lo teniacutea todo cerrado como un monasterio porque sabiacutea (como quien tambieacuten sabiacutea) que la ocasioacuten suele derribar los maacutes fuertes y robustos corazones (450 lib 20 cap 31)

No fueron uacutenicamente miembros de la iglesia catoacutelica los que valoraron la lucha con-tra la tentacioacuten siguiendo al pie de la letra el crudeliacutesimo refraacuten laquoentre santa y santo pared de cal y cantoraquo Se tienen algunas noticias de la vida social de los primeros tiem-pos de la colonia En estos documentos se puede observar coacutemo no distaban mucho las oacuterdenes que se dictaban en la metroacutepoli y las que se llevaban a cabo en la Nueva Espantildea La vida social tanto de damas como de algunos miembros de la iglesia de las colonias era maacutes laquorelajadaraquo de lo que las normas permitiacutean Gracias a la informacioacuten ofrecida por Manuel Romero de Terreros disponemos de los nombres de las primeras virreinas

Las esposas de los primeros cinco Virreyes Don Antonio de Mendoza Don Luis de Velasco Don Gastoacuten de Peralta Don Martiacuten Enriacutequez de Almanza y Don Lorenzo Suaacuterez de Mendoza Conde de la Coruntildea fueron respectivamente Dontildea Caterina de Vargas Dontildea Ana de Cas-tilla y Mendoza hija de Don Diego de Castilla Sentildeor de Gor y Caba-

159ESPANtildeOLAS DE ULTRAMAR EN LA HISTORIA Y EN LA LITERATURA

llerizo de Carlos V Dontildea Leonor de Vieo Dontildea Mariacutea Manrique hija del Marqueacutes de Aguilar y Dontildea Catalina de la Cerda hija del segundo Duque de Medinaceli (Romero 2)

Existen noticias concretas de la seacuteptima virreina de la Nueva Espantildea (1586) dontildea Blanca de Velasco marquesa de Villamanrique En ellas destaca lo anteriormente men-cionado sobre la falta de tolerancia existente en aquellos tiempos difiacutecilmente com-prensible si no fuera por fragmentos esporaacutedicos conservados sobre la vida colonial en la Nueva Espantildea En la siguiente Relacioacuten hecha por autores anoacutenimos sobre la visita que hizo Fray Alonso Ponce Comisario General de la Orden Seraacutefica a las provincias de la Nueva Espantildea se mencionan las eneacutergicas medidas que con los miembros de su orden en su opinioacuten de moral laquomuy relajadaraquo tomoacute este religioso Tambieacuten aparecen mencionadas sus relaciones con la Virreina

Captoacutese ademaacutes la enemistad del gobernante y de la Virreina Dontildea Blanca de Velasco hija del cuarto Conde de Nieva sentildeora seguacuten pare-ce de conducta ligera y caraacutecter maacutes que dominante laquoPor este mismo tiempo (septiembre de 1586) fueron el Virey y la Vireyna a holgarse y recrearse en la cibdad de Xochimilco Posoacute con toda su casa dentro de nuestro convento en un dormitorio deacutel y detuacutevose alliacute siete u ocho diacuteas en que los indios les hicieron grandes fiestas aunque les costaron caras porque en una dellas murieron dos o tres dellos con un tiro que se disparoacute y reventoacute y al principal indio de aquella cibdad hirieron muy malraquo (Romero 3-4)

A pesar del riacutegido control eclesiaacutestico y civil que habiacutea en la Nueva Espantildea existieron tambieacuten pareacutentesis en los que incluso miembros de la iglesia y mujeres mdashhumanos al fin y al cabomdash pudieron disfrutar de algunos momentos de regocijo y alegriacutea Con-tinuando con la cita anterior el mismo autor se queja del laquoexcesoraquo de libertad en los frailes que se suponiacutea que teniacutean que profesar una extremada pobreza y no digamos castidad En primer lugar se describen pormenorizadamente la abundancia en el tipo y cantidad de comida de toda clase dulces y vino que se consumieron con largueza y generosidad durante aquellas fiestas Pero lo que maacutes indigna al autor (o autores) fue que llegasen a entrar mujeres en el convento

y aunque todo esto es malo delante de Dios y delante de los hom-bres lo que maacutes mal parecioacute y de que todo el mundo tuvo que mur-murar fueacute la demasiada libertad rotura y disolucioacuten que hubo en en-trar y estar muy de propoacutesito mujeres no soacutelo la Vireyna y las suyas sino otras muchas dentro del dicho convento y andar por las celdas como si fuese cosa profana y como si no hubiera breve apostoacutelico que soacute graves penas y censuras prohibe estas entradas y como si a los frai-les no los comprendiera el dicho breve por admitirlas y no estuviera asiacute declarado y mandado por nuestros estatutos generales de Toledo (Romero 4-5)

La preocupacioacuten por las laquotentaciones de la carneraquo fuera del matrimonio siempre es-tuvo en la mente de los religiosos espantildeoles asiacute como de otras nacionalidades y reli-

160 JUAN FRANCISCO MAURA

giones que intentaban vanamente erradicar algo tan intriacutenseco al ser humano como a cualquier otra especie animal Esta preocupacioacuten se acentuoacute mucho maacutes en el Nuevo Mundo donde muchas sociedades tribales no veiacutean a la mujer como parte integrante de su propiedad privada La razoacuten es obviamente socioloacutegica y ha existido desde el principio de los tiempos en las civilizaciones maacutes primitivas laquoNo desearaacutes a la mujer del proacutejimoraquo El quebrantar este precepto equivaldriacutea a desestabilizar desde su base a la sociedad judeo-cristiana fundamentada en la familia Las penas aplicadas en estas transgresiones seraacuten lo suficientemente severas como para marginar socialmente mdashen el mejor de los casosmdash a aquellos que las pongan en praacutectica Siendo la mujer la encar-gada por la naturaleza de trasmitir la descendencia de la especie su libertad sexual se veraacute limitada por el peligro de quedar embarazada cada vez que ignore tal elemental precepto140

Primeras escritoras del Nuevo Mundo

Contra cuerdos y contra locos estaacute obligado cualquier caballero andante a volver por la honra de las mujeres cualesquiera que sean Cuanto maacutes por las reinas de tan alta guisa y pro como fue la reina Madaacutesima a quien yo tengo particular aficioacuten por sus buenas partes porque fuera de haber sido fermosa ademaacutes fue muy prudente y muy sufrida en sus calamidades que las tuvo muchas (Cervantes Don Quijote)

Fueron varias las escritoras que durante los siglos XVI y XVII tuvieron una relacioacuten di-recta o indirecta con el Nuevo Mundo Muchas de ellas eligieron la vida monaacutestica mdashen algunos casos como refugio huyendo de sus maridosmdash uacutenica salida en una estructura social en donde no eran muchas las opciones especialmente en una eacutepoca donde el fac-tor religioso pesaba casi tanto como el econoacutemico pero sobre todo para dedicarse a una vida espiritual difiacutecilmente alcanzable en otras circunstancias Mariloacute Vigil apunta que las monjas que lo eran por su propia voluntad ademaacutes de tener inquietudes religiosas tambieacuten las teniacutean intelectuales como es el caso de la escritora miacutestica espantildeola Santa Teresa de Jesuacutes (1515-1582) que ademaacutes de tener una de las vidas maacutes interesantes que se conozcan supo sacar tiempo para escribir las maacutes bellas manifestaciones de la poesiacutea liacuterica y sobre todo de la prosa castellana (Vigil 237-38) Cada una de estas mujeres de-dicadas a la vida literaria y espiritual de su tiempo se merece muchiacutesimo maacutes espacio del que se les pueda ofrecer en estas pocas liacuteneas No obstante con estas pasajeras men-

140 Aunque afortunadamente las cosas han cambiado para la mujer no se debe dejar de mencionar la can-tidad de abusos sexuales de la que es viacutectima en la sociedad moderna

161ESPANtildeOLAS DE ULTRAMAR EN LA HISTORIA Y EN LA LITERATURA

ciones se espera al menos incluirlas y poder despertar el suficiente intereacutes para que sus vidas y sus obras no sigan sumergidas en las simas del olvido Para que estas mujeres de la iglesia pudiesen satisfacer su curiosidad cognoscitiva era necesario romper todas aquellas barreras que supusiesen un estorbo o una restriccioacuten a la hora de investigar consultar o hablar con cualquier persona religiosa de cualquier orden o secular ya fue-se obispo o cleacuterigo Las posiciones intelectuales entre las diferentes oacuterdenes religiosas fueron muy dispares como bien es sabido No eran iguales los planteamientos teoloacute-gicos de los dominicos que los de los franciscanos o los de los carmelitas que los de los agustinos o jesuitas Era necesario por lo tanto tener acceso a estas fuentes de informa-cioacuten para poder constrastar las diferencias y hacer valoraciones propias (Vigil 237-38) El escritor espantildeol Caro Baroja destaca el caraacutecter enciclopeacutedico del catolicismo donde se han integrado corrientes y posturas muy dispares que a traveacutes del diaacutelogo daban cierto espacio al creyente con maacutes curiosidad intelectual para que este pudiese compa-rar y valorar las diferentes opciones que se le ofreciacutean (Vigil 237-38)

Varias de estas mujeres intelectuales fueron hijas de conquistadores que aunque na-cidas en suelo americano seguiacutean expresaacutendose en la lengua de sus padres con no me-nos fuerza que sus contemporaacuteneas peninsulares Es cierto que existieron numerosas escritoras en el Nuevo Mundo durante el siglo XVIII algunas dedicadas incluso al estudio de las matemaacuteticas como la mexicana Dontildea Francisca Gonzaga y Castillo Pero para limitar el presente trabajo a los siglos XVI y XVII uacutenicamente se incluiraacuten ejemplos de estos dos siglos

La peruana Josefa de Alarcoacuten publicoacute en 1648 unas liras dedicadas a las Exequias del Priacutencipe Baltasar Carlos

Cifro en capilla breveEl tribunal de la Magestad maacutes graveEn fe de lo que debeA Carlos que en dos mundos no cabe141

El caso de Sor Jeroacutenima de la Asuncioacuten es muy interesante una mujer que tuvo la oportunidad de viajar a Meacutexico y posteriormente a las Filipinas para cumplir con las mi-siones que le habiacutean sido encomendadas por su orden Nacida en Toledo en 1555 en el seno de una noble y acaudalada familia estuvo destinada a recorrer el mundo ofrecien-do sus servicios a todos los necesitados distinguieacutendose por su ardiente caridad laquovien-do que los galeotes eran tratados con dureza excesiva sobre todo cuando los llevaban de un pueblo a otro procuroacute aliviar las penas de aquellos desgraciados y lo consiguioacute en parteraquo (Serrano y Sanz 268 65) Hija del licenciado e ilustre jurista Pedro Garciacutea Yaacute-ntildeez y de dontildea Catalina de la Fuente ingresoacute contra su voluntad en el monasterio de las Clarisas de Santa Isabel de los Reyes (Toledo) el 5 de agosto de 1570 (Trevintildeo 46) hay que decir que eacutesta no seraacute la uacutenica voluntad contra la que tuvo que luchar

Sor Jeroacutenima se embarcoacute para Meacutexico y de alliacute partioacute hacia Manila junto con siete compantildeeras en el famoso laquoGaleoacuten de Manilaraquo que saliacutea anualmente del puerto mexi-cano de Acapulco Su viaje a las Filipinas duroacute un antildeo y tres meses desde su salida de Espantildea tiempo en el que demostroacute un gran valor y determinacioacuten por el soacutelo hecho de

141 Manuel Serrano y Sanz Apuntes para una biblioteca de escritoras espantildeolas desde el antildeo 1401 al 1833 vols 268 269 270 271 Biblioteca de Autores Espantildeoles (Madrid Atlas 1975) 268 19

162 JUAN FRANCISCO MAURA

embarcarse en tan precarias naves Fue la primera misionera de Oceaniacutea muriendo en Manila en 1621 Alliacute fundoacute el monasterio de Santa Clara que perviviriacutea hasta ser bom-bardeado en la Segunda Guerra Mundial (Trevintildeo 47) Escribioacute su Vida donde trata de la fundacioacuten del convento y de todas las tribulaciones mdashllegoacute a ser excomulgadamdash y satisfacciones que una vida dedicada a una causa justa proporciona Tambieacuten escribioacute una obra de caraacutecter filosoacutefico-teoloacutegico titulada Carta de marear en el mar del mundo nombre alegoacuterico que da cuenta de la enorme distancia recorrida a traveacutes del laquomar del espiacuterituraquo por sor Jeroacutenima He aquiacute algunos de sus versos de caraacutecter religioso

Vuestra soy para vos naciacuteiquestQueacute mandaacuteis hacer de miacute Inaccesible grandezaEterna Sabiduriacuteay bondad del alma miacuteaDios un ser poder y Altezamirad la suma pobrezade eacutesta que se ofrece aquiacuteiquestQueacute mandaacuteis hacer de miacute (Serrano y Sanz 268 66)

Ya en Meacutexico tenemos otro ejemplo de una mujer dedicada por completo a Dios y al estudio y composicioacuten de obras de caraacutecter teoloacutegico Dontildea Ana Mariacutea del Costa-do de Cristo nacida en la ciudad de Tlaxcala hacia el antildeo 1650 Tomoacute la orden de San Francisco para consagrarse a las labores de su orden y a la escritura Se dice que con los escritos de Dontildea Ana Mariacutea se podriacutean formar veinte tomos (Serrano y Sanz 268 282) Estas son algunas de sus obras Vida y muerte de Jesucristo Nuestro Sentildeor Vida del Seraacutefico Padre San Francisco de Asiacutes Vida de la iacutenclita Virgen Santa Clara Vida del sutiliacutesimo doctor Juan Duns Escoto

Pero no todas las monjas tuvieron vidas tan dedicadas al estudio y la oracioacuten Loacutegica-mente entre un nuacutemero tan grande de mujeres existioacute de todo y seriacutea un error pensar que todos los conventos femeninos estaban integrados por laquocaacutendidas palomasraquo Una monja en el siglo XVI y XVII teniacutea mucha maacutes fuerza que una mujer ordinaria ya que actuaban en grupo y la entrada a los recintos donde viviacutean estaba permitida solo a mu-jeres Esta situacioacuten las haciacutea mucho maacutes fuertes a todos los niveles que una mujer sola protegida uacutenicamente por su familia laquoLas monjas durante los siglos XVI y XVII lucharon por eludir la clausura y por zafarse del control que los frailes de las secciones masculi-nas de sus congregaciones ejerciacutean sobre ellasraquo (Vigil 230) Soacutelo un antildeo maacutes tarde que dontildea Ana Mariacutea del Costado de Cristo en 1651 y a 12 leguas de Meacutexico nacioacute la sin par Sor Juana Ineacutes de la Cruz hija de don Pedro Manuel de Asbaje natural de Vergara (Vizcaya) y de Dontildea Isabel Ramiacuterez de Santillana hija de espantildeoles (Serrano y Sanz 268 289) Por ser sin lugar a dudas la poeta maacutes importante de su tiempo y probable-mente la maacutes conocida del mundo hispano no profundizaremos en ella Su obra es un canto a la inteligencia y el exponente maacutes destacado de la literatura barroca americana tanto en prosa como en verso Destacareacute simplemente que Sor Juana Ineacutes pese a vivir en un sociedad donde no eran excesivas las libertades concedidas a las mujeres tuvo el caraacutecter y la determinacioacuten de dejarnos las maacutes bellas poesiacuteas amorosas que si bien estuvieron enmarcadas en un ambiente religioso como era de esperar por su condicioacuten

163ESPANtildeOLAS DE ULTRAMAR EN LA HISTORIA Y EN LA LITERATURA

pudieron transcender como unas de las maacutes bellas manifestaciones literarias que hoy en diacutea se conservan Fue su agudeza mental sensibilidad y cultura tal que no fueron suficientes los soacutelidos muros del convento para contener el genio de tan extraordinaria mujer Recordemos sus conocidiacutesimos versos en defensa de las mujeres

Hombres necios que acusaacuteisa la mujer sin razoacutensin ver que sois la ocasioacutende lo mismo que culpaacuteis142

Las metaacuteforas y la delicadeza que emplea en rebatir a su obispo en su laquoRespuesta a sor Filotea de la Cruzraquo no son solamente el epiacutetome del feminismo de su tiempo sino una de las maacutes brillantes manifestaciones del barroco hispano Poesiacutea teatro ensayo y un conocimiento extraordinario de las ciencias claacutesicas de su tiempo hacen de esta mujer un ejemplo extraordinario de las letras universales Ya son cientos los artiacuteculos y libros que se han escrito sobre Sor Juana y no dejan de aparecer tesis doctorales sobre los maacutes diversos temas conectados con la citada autora143 Como nos dice Stephanie Merrim en su documentada obra Early Modern Womenrsquos Writing and Sor Juana Ineacutes de la Cruz

She wrote and published on secular themes as atypical for a nun as human love Her remarkably extensive writings essayed and reenacted most of the (male) poetic dramatic theological and even philosophi-cal discourses of her times in the metropolis making her works a com-pendium of baroque culture in its diversity and syncretism Sor Juana self-creation as a learned women effectively toppled many of the walls in which she was materially enclosed and positioned her within the dynamic world of early modern European culture (xii)

No se debe dejar de mencionar a otras escritoras novohispanas de la eacutepoca que aun-que no fueron tan proliacuteficas y relevantes como Juana Ineacutes de la Cruz dejaron testimo-nio de algunos acontecimientos que tienen intereacutes socioloacutegico o testimonial Este es el caso de Dontildea Mariacutea Estrada Medinilla de igual nombre y apellido que la mujer que acompantildeoacute a las tropas de Corteacutes en su primera entrada a Meacutexico Natural de Meacutexico publicoacute toda su obra a mediados del siglo XVII concentraacutendose principalmente en la lle-gada del Marqueacutes de Villena virrey y capitaacuten general de la Nueva Espantildea a la ciudad de Meacutexico en el antildeo 1640 Escrita en octavas reales la obra trata de las fiestas de toros y cantildeas con que se obsequioacute al citado virrey Fue impresa en Meacutexico en 1641 (Serrano y Sanz 269 402)

Mucho maacutes importante para el presente libro es Dontildea Isabel de Guevara que escribioacute en 1556 la carta en que se expone la ayuda que ofrecieron las mujeres en el descubri-miento y conquista del Riacuteo de la Plata No cabe la menor duda de que esta carta es uno

142 Para una mejor comprensioacuten del caraacutecter de esta excepcional mujer veacutease entre los numeros trabajos publicados Fredo Arias de la Canal Intento de psicoanaacutelisis de Juana Ineacutes y otros ensayos sorjuanistas (Meacutexico Frente de Afirmacioacuten Hispanista 1972) 47

143 Veacuteanse entre otros trabajos Octavio Paz Sor Juana Ineacutes de la Cruz o las trampas de la fe Georgina Sabat de Rivers En busca de Sor Juana Margo Glantz Sor Juana la comparacioacuten y la hipeacuterbole Gerard C Flynn Sor Juana Ineacutes de la Cruz Stephanie Merrim Feminist perspectives on Sor Juana Ineacutes de la Cruz Pamela Kirk Sor Juana Ineacutes de la Cruz religion art and feminism

164 JUAN FRANCISCO MAURA

de los documentos maacutes importantes con que contamos en relacioacuten a la aportacioacuten fe-menina en el proceso de la conquista de Ameacuterica Su importancia viene dada por varios factores Primero es uno de los primeros testimonios mdashsi no el primeromdash en donde se expone abiertamente la indispensable colaboracioacuten de las mujeres en el descubrimien-to y conquista de tierras en el Nuevo Mundo laquoQue si no fuera por ellas todos fueran acabadosraquo En segundo lugar la informacioacuten vertida en estas liacuteneas presenta en parte la manera de pensar de una mujer espantildeola en tales circunstancias Extraordinario tes-timonio de primera mano que nos da una idea de lo que significoacute en muchos casos el valor y entrega constantes de muchas de estas mujeres que auacuten a riesgo de perder sus vidas no dudaron en luchar al lado de los hombres por una causa que consideraban laquocomuacutenraquo

La relevancia histoacuterica de dicha carta hace que merezca ser transcrita en su totali-dad

Carta de dontildea Isabel de Guevara a la princesa gobernadora dontildea Juana exponiendo los trabajos hechos en el descubrimiento y conquista del Riacuteo de la Plata por las mujeres para ayudar a los hombres y pidiendo repartimiento

para su marido Asuncioacuten 2 de julio de 1556

Muy alta y muy poderosa sentildeora

A esta provincia del Riacuteo de la Plata con el primer gobernador de ella don Pedro de Mendoza hemos venido ciertas mujeres entre las cuales ha querido mi ventura que fuese yo la una y como la armada llegase al puerto de Buenos Aires con mil quinientos hombres y les faltase el bastimento fue tamantildea el hambre que a cabo de tres meses murie-ran los mil esta hambre fue tamantildea que ni la de Jerusalem se le puede igualar ni con otra ninguna se puede comparar Vinieron los hombres en tanta flaqueza que todos los trabajos cargaban de las pobres mu-jeres asiacute en lavarles las ropas como en curarles hacerles de comer lo poco que teniacutean limpiarlos hacer centinela rondar los fuegos armar las ballestas cuando algunas veces los indios les veniacutean a dar guerra hasta cometer a poner fuego en los versos y a levantar los soldados los que estaban para ello dar arma por el campo a voces sargentean-do y poniendo en orden los soldados porque en este tiempo como las mujeres nos sustentamos con poca comida no habiacuteamos caiacutedo en tanta flaqueza como los hombres Bien creeraacute V A que fue tanta la so-licitud que tuvieron que si no fuera por ellas todos fueran acabados y si no fuera por la honra de los hombres muchas maacutes cosas escribiera con verdad y los diera a ellos por testigos Esta relacioacuten bien creo que la escribiraacuten a V A maacutes largamente y por eso cesareacute Pasada esta tan peligrosa turbunada determinaron subir el riacuteo arriba asiacute flacos como estaban y en entrada de invierno en dos bergantines los pocos que quedaron vivos y las fatigadas mujeres los curaban y los miraban y les guisaban la comida trayendo la lentildea a cuestas fuera del naviacuteo y animaacutendolos con palabras varoniles que no se dejasen morir que presto dariacutean en tierra de comida metieacutendolos a cuestas en los

165ESPANtildeOLAS DE ULTRAMAR EN LA HISTORIA Y EN LA LITERATURA

bergantines con tanto amor como si fueran sus propios hijos Y como llegamos a una generacioacuten de indios que se llaman tinbues sentildeores de mucho pescado de nuevo los serviacuteamos en buscarles diversos modos de guisados porque no les diese en rostro el pescado a causa de que lo comiacutean sin pan y estaban muy flacos Despueacutes determinaron subir el Paranaacute arriba en demanda de bastimento en el cual viaje pasaron tanto trabajo las desdichadas mujeres milagrosamente quiso Dios que viviesen por ver que en ellas estaba la vida de ellos porque todos los servicios del naviacuteo los tomaban ellas tan a pechos que se teniacutea por afrentada la que menos haciacutea que otra sirviendo de marear la vela y gobernar el naviacuteo y sondar de proa y tomar el remo al soldado que no podiacutea bogar y escotar144 el naviacuteo y poniendo por delante a los soldados que no se desanimasen que para los hombres eran los trabajos verdad es que a estas cosas ellas no eran apremiadas ni las haciacutean de obliga-cioacuten ni las obligaba si solamente la caridad Asiacute llegaron a esta ciudad de la Asuncioacuten que aunque ahora estaacute muy feacutertil de bastimentos en-tonces estaba de ellos muy necesitada que fue necesario que las muje-res volviesen de nuevo a sus trabajos haciendo rosas con sus propias manos rosando y carpiendo y sembrando y recogiendo el bastimento sin ayuda de nadie hasta tanto que los soldados guarecieron de sus fla-quezas y comenzaron a sentildeorear la tierra y adquirir indios e indias de su servicio hasta ponerse en el estado en que ahora estaacute la tierra He querido escribir y traer a la memoria de V A para hacerle saber la ingratitud que conmigo se ha usado en esta tierra porque al presente se repartioacute por la mayor parte de los que hay en ella asiacute de los anti-guos como de los modernos sin que de miacute y de mis trabajos se tuviese ninguna memoria y me dejaron de fuera sin me dar indio ni ninguacuten geacutenero de servicio Mucho me quisiera hallar libre para me ir a presen-tar delante de VA con los servicios que a SM he hecho y los agravios que ahora se me hacen mas no estaacute en mi mano porque estoy casada con un caballero de Sevilla que se llama Pedro de Esquivel que por servir a SM ha sido causa que mis trabajos quedasen tan olvidados y se me renovasen de nuevo porque tres veces le saqueacute el cuchillo de la garganta como allaacute VA sabraacute A que suplico mande me sea dado mi repartimiento perpetuo y en gratificacioacuten de mis servicios [en el origi-nal del AHN Diversos doc 141 dice ademaacutes mande que sea proveydo mi marido de alguacuten cargo conforme a la calidad de su persona pues el de su parte por sus servicios lo merece] lo merece Nuestro sentildeor acre-ciente su Real vida y estado por muy largos antildeos De esta ciudad de la Asuncioacuten y de julio 2 1556 antildeosServidora de V A que sus Reales manos besa

Dontildea Isabel Guevara

144 Sacar agua de un riacuteo acequia o presa

166 JUAN FRANCISCO MAURA

Sobremdash A la muy alta y muy poderosa sentildeora Princesa dontildea Joana Gobernadora de los reinos de Espantildea etc ndash En su Consejo de Indias (Isabel de Guevara 619-21)

Iroacutenicamente la carta teniacutea que llegar a manos de la desdichada heredera del trono de Castilla e hija de los Reyes Catoacutelicos Juana laquola Locaraquo que habiacutea muerto el antildeo an-terior Son profeacuteticas las palabras de esta mujer no soacutelo porque sus hechos personales quedasen en el olvido sino porque incluso se ha borrado la historia de las mujeres en el Nuevo Mundo negando su presencia Por lo menos Isabel Guevara tuvo acceso a una pluma iquestCuaacutentas seriacutean las que ni siquiera sabriacutean escribir

Otra contemporaacutenea fue dontildea Leonor de Iciz que vivioacute durante la segunda mitad del siglo XVI Interesa sobre todo por los sonetos que escribioacute en elogio de Ercilla soldado que participoacute en la conquista de Chile y que se inmortalizoacute con su obra La Araucana (Serrano y Sanz 269 534) Lo mismo hizo Dontildea Bernarda Lintildeaacuten en 1610 autora de otro soneto en memoria del capitaacuten Gaspar Peacuterez de Villagraacute que participoacute en la conquista de Nuevo Meacutexico (Serrano y Sanz 270 14) Los escritos de estas mujeres tratan de de dos de las eacutepicas maacutes dramaacuteticas de la conquista

En el Peruacute y en pleno siglo XVII aparece otra fundadora de conventos Sor Bernardina de Jesuacutes que ademaacutes fue comparada con Santa Teresa por la semejanza de sus laquocartasraquo con las de la santa de Avila Fue fundadora del convento de Tacunga en Quito maacutes tarde destruiacutedo por un terremoto Dice Serrano y Sanz con respecto a su biografiacutea un tanto legendaria que fue carmelita descalza de Lima y hermana de Dontildea Mariacutea Benavides y Esquivel abuela de D Pedro de Peralta Barnuevo (Serrano y Sanz 269 553) Dicen que esta santa se alimentoacute durante treinta antildeos con laquochochos y caacutescaras de naranja hecho tan raro como increiacuteble Cuando fallecioacute reparaban las monjas en ponerle una vara de azucenas porque habiacutea sido casada y aquellas flores aparecieron milagrosamente sobre el cadaacuteverraquo (Serrano y Sanz 269 553)

Otra limentildea del primer cuarto del siglo XVII con reputacioacuten de santa fue Dontildea Luisa Melgarejo En este caso no se trata de una religiosa de oficio sino de la mujer del doctor Juan de Soto La uacutenica diferencia es que dontildea Luisa al parecer teniacutea laquovisiones y reve-lacionesraquo lo que debioacute poner nervioso a maacutes de un miembro del tribunal del laquoSanto Oficioraquo que consideraron sus escritos laquoculpadosraquo De su papel de laquosantaraquo pasa por lo tanto al de laquoposesaraquo o laquoendemoniadaraquo El inquisidor de Lima Gaitaacuten escribioacute un infor-me donde a traveacutes de la opinioacuten puacuteblica y de otras averiguaciones se deciacutea que dontildea Luisa Melgarejo laquomujer santaraquo sabiacutea cuando las almas de los difuntos saliacutean del Purga-torio El diacutea 14 de noviembre de 1623 se decidioacute tomar posesioacuten de todos los cuadernos en los que habiacutea escrito las experiencias de todos sus laquoarrobos suspensiones extasis y revelacionesraquo Estos cuadernos una vez recogidos presentaron toda una serie de al-teraciones borrones adiciones enmiendas incluso diferente letra por lo que despueacutes de haber sido examinados resultaron culpables145 Excelente imaginacioacuten debioacute tener dontildea Luisa Melgarejo la suficiente al parecer para convencer a algunos miembros de la iglesia de que en sus escritos laquohabiacutea algoraquo que mereciacutea la pena Estas cosas ocurriacutean en Lima uno de los centros culturales maacutes importantes de la vida social y poliacutetica en la Ameacuterica espantildeola Lima a comienzos del siglo XVII seguacuten el empadronamiento llevado

145 Serrano y Sanz 270 47 Veacutease J T Medina Historia del tribunal del Santo Oficio de la Inquisicioacuten de Lima (1569-1820) (Santiago Imprenta Gutemberg 1887) Tomo II 34-41

167ESPANtildeOLAS DE ULTRAMAR EN LA HISTORIA Y EN LA LITERATURA

a cabo en 1614 por el marqueacutes de Montesclaros era una ciudad de 25000 habitantes de los que 11000 eran espantildeoles El nuacutemero de religiosos y religiosas llegaba a 1720 (Pittaluga 77)

Se sabe que en la Isla de Santo Domingo durante el siglo XVI nacioacute o al menos resi-dioacute una poeta de ceacutelebre apellido en los aconteceres del Nuevo Mundo Dontildea Elvira de Mendoza de la que se conserva un manuscrito en la Real Academia de la Historia laquoCantares miacuteos que estaacuteis rebeladosraquo Eugenio de Salazar hace un elogio de ella como poeta en un Soneto a la ilustre Poeta y Sentildeora Dontildea Elvira de Mendoza moradora en la ciudad de Santo Domingo (Serrano y Sanz 270 53)

Nacida en Burgos sobre el antildeo 1590 dontildea Luisa de Padilla merece un lugar aparte dentro del grupo de mujeres escritoras de su eacutepoca Por su estilo faacutecil y castizo su no-vedad de pensamientos y su rica erudicioacuten recibioacute el siguiente comentario de Manuel Serrano y Sanz laquoPocas figuras hay en nuestra historia literaria femenil que puedan compararse a esta eminente prosista acaso la maacutes notable de cuantas florecieron en Es-pantildea durante el siglo XVIIraquo (Serrano y Sanz 270 95-96) Este comentario y comparacioacuten deberiacutea ampliarse para que tambieacuten incluyese a laquola historia literaria varonilraquo

Dontildea Luisa fue defensora de la labor que la Inquisicioacuten estaba realizando en la laquolim-piezaraquo de mujeres laquosoldados del demonioraquo que existieron en algunas provincias espa-ntildeolas en aquel tiempo Muchas de las mujeres que combinaban la magia con los po-deres curativos fueron condenadas no solamente por hombres de la Inquisicioacuten sino tambieacuten por mujeres de todas las clases sociales como es el caso de Luisa de Padilla condesa de Aranda En su obra Elogios de la verdad e invectiva contra la mentira preveniacutea contra aquellos que practicaban artes en contra de la religioacuten cristiana La magiacutea negra seguacuten Padilla era la causante de que muriesen casi tantas personas como otras causas naturales habieacutendose descubierto hasta seis mil brujas en Vizcaya y Guipuzcua con-fesando una mujer de un pueblo pequentildeo haber matado con su laquomagiaraquo a ochocientas personas (Perry 31) Eran estos laquomales de ojoraquo y maldiciones seguacuten la autora las causas de que se secasen los pechos de las madres lactantes que se separasen las parejas casa-das y que abortasen las embarazadas (Perry 31)

Si se tiene en cuenta que dontildea Luisa estuvo emparentada con la maacutes rancia aristocra-cia de su tiempo o lo que es lo mismo con algunos de aquellos que en cierta manera dirigiacutean los destinos de Espantildea en aquella eacutepoca (Duques de Lerma Duque de Uceda Marqueacutes de Cueacutellar Conde de Santa Gadea Marqueacutes de Belmonte por citar algunos) se comprenderaacute mejor su identificacioacuten con una institucioacuten que en teoriacutea velaba por la salvaguarda de los valores laquoeternosraquo de una Espantildea destinada a ser la campeona del ca-tolicismo durante los siglos XVI y XVII El padre de dontildea Luisa fue don Martiacuten de Padilla y Manrique extraordinario militar que proboacute su valor contra enemigos moriscos ingle-ses holandeses piratas berberiscos y el renegado genoveacutes Muley Faxad Fue veterano de la batalla de Lepanto donde apresoacute a cuatro galeras y acompantildeoacute con su escuadra a la reina Dontildea Margarita de Austria cuando vino de Geacutenova en 1598 laquoHabiacutea obtenido a 24 de julio de 1587 el tiacutetulo de Conde de Santa Gadea y en 1596 el de Capitaacuten General de la Armada del mar Oceacuteanoraquo (Serrano y Sanz 27095-96)

Por otra parte tambieacuten se sabe que dontildea Luisa participoacute directamente y desde tem-prana edad en la praacutectica de algunas actividades intelectuales como la historia y la arqueologiacutea a la vez que dedicaba su tiempo a virtudes cristianas como la caridad y el socorro de los necesitados (Serrano y Sanz 270 97) Resulta mucho maacutes faacutecil compren-

168 JUAN FRANCISCO MAURA

der la postura ideoloacutegica de esta gran mujer si tienen en cuenta ademaacutes de los factores antes mencionados otros tantos de caraacutecter biograacutefico concernientes a su educacioacuten y matrimonio

Otra escritora fue la mexicana dontildea Mariacutea Casilda Pozo natural de Temestla (Meacutexi-co) Nacida en el mes de abril de 1682 dejoacute escrita su biografiacutea en 16 cuadernos el ma-nuscrito original se encuentra en la biblioteca del colegio de San Gregorio de Meacutexico Fue su confesor el jesuiacuteta Domingo Quiroga que fue quieacuten la incitoacute a escribir su obra (Serrano y Sanz 270 137) Sor Juana de San Antonio aparece a principios del siglo XVII formando parte de un grupo de religiosas espantildeolas que fueron a Manila por la ruta de Meacutexico Ademaacutes de distinguirse por sus cualidades personales su obra interesa por ofrecer informacioacuten testimonial y costumbrista acerca de la forma de vestir de chinos y japoneses (Serrano y Sanz 270 225)

Otra monja esta vez ecuatoriana fue Gertrudis de San Ildefonso Nacida en 1652 profesoacute su vocacioacuten en el convento de Santa Cruz de Quito dejando escrita su vida por mandato de su confesor el padre Martiacuten de la Cruz el cual hizo una biografiacutea laquoen tres gruesos voluacutemenesraquo Gertrudis de San Ildefonso murioacute en 1709 (Serrano y Sanz 270 300) en olor de santidad

Sor Mariacutea Ana Agueda de San Ignacio nacioacute el 3 de marzo de 1695 en la dioacutecesis de la puebla de los Angeles en un rancho del lugar de Santiago Tecaliacute (Serrano y Sanz 270300) Esta monja mexicana escribioacute varias obras durante su vida conventual a lo largo de la cual desempentildeoacute el cargo de priora por muchos antildeos Entre sus obras todas de caraacutecter piacuteo y de laquoamor divinoraquo escribioacute un curioso y laquocopiosoraquo tratado de la Leche virginal de la Soberana Madre de Dios El padre Fr Juan de Villa Saacutenchez hace el siguiente comentario al respecto laquoen que hablando primero en sentido natural de los beneficios que debemos a Nuestra Sentildeora pasa a tratar en sentido miacutestico y alegoacuterico enten-diendo en la leche la doctrinaraquo (Serrano y Sanz 270301) Mexicana fue tambieacuten Sor Petronila de San Joseacute que ejercioacute como abadesa del Real monasterio de Jesuacutes Mariacutea de la ciudad de Meacutexico Escribioacute Vidas de varias religiosas ejemplares obra que tiene su im-portancia ya que al parecer laquoDe esta obra se sirvioacute D Carlos de Siguumlenza y Goacutengora para escribir su Parayso Occidental (Meacutexico 1684) seguacuten eacutel mismo declara en el proacutelogo diciendo lsquoa quien si hay algo bueno en esta historia se le debe todorsquoraquo (Serrano y Sanz 270 354) Menos conocida fue su compatriota Sor Luisa de Santa Catalina natural de Xacona laquopueblo situado en las inmediaciones de Zamora (Meacutexico)raquo siendo bautizada en 1682 Escribioacute Cartas espirituales a su confesor el P Juan Loacutepez de Aguado (Serrano y Sanz 270 361-62)146

Todos estos escritos la mayoriacutea de ellos ignorados por el gran puacuteblico tienen la im-portancia de darnos una perspectiva diferente En otras palabras ensentildearnos la maacutes refinada sensibilidad de muchas mujeres que permanecieron y en su mayoriacutea siguen permaneciendo a laquooscurasraquo de una eacutepoca tan rica de la literatura espantildeola como fue el Siglo de Oro Este siglo fue tambieacuten en su dimensioacuten literaria y artiacutestica patrimonio de la mujer

146 Para profundizar en muchas de estas escritoras hispano-americanas la consulta de la Biblioteca Hispano-Americana de Beristain de Souza resulta de capital importancia

169ESPANtildeOLAS DE ULTRAMAR EN LA HISTORIA Y EN LA LITERATURA

Sor Nada ardores divinos de una monja adolescente escritos ineacutedi-tos de una recieacuten profesa del siglo XVI147

iexclQueacute encantadores son tus amores hermana miacutea espo-sa iexclQueacute deliciosos son tus amores maacutes que el vino Y el aroma de tus perfumes es mejor que el de los baacutelsamos Miel virgen destilan tus labios esposa miel y leche hay en tu lengua y el perfume de tus vestidos es como aroma de incienso (Cantar de los Cantares 4 10-11)

Sor Nada llamada asiacute por humildad seguacuten dice el Indice de manuscritos de la Biblio-teca Nacional de Madrid es uno de los ejemplos maacutes desconocidos e interesantes que tenemos de la poesiacutea y prosa amoroso-religiosa del siglo XVII Hasta la fecha nunca se habiacutea publicado su obra e incluso hasta el antildeo 1995 para mi sorpresa no habiacutea copias microfilmadas de sus manuscritos en la Biblioteca Nacional Serrano y Sanz en su libro Apuntes para una Biblioteca de Escritoras Espantildeolas hace una escueta y pasajera mencioacuten de esta mujer y de su obra (68-69) siendo eso todo lo que hasta ahora se sabiacutea de ella Sus escritos consisten en los siguientes manuscritos

1 laquoEn queacute consiste un verdadero amor de Diosraquo 9 hojas uacutetiles en 4ordm letra del siglo XVII Biblioteca Nacional de Espantildea Manuscrito 1295926

2 laquoPintura del Propio Amorraquo laquoPintura del propio Amorraquo 10 hojas uacutetiles en 4ordm letra del siglo XVII Biblioteca Nacional de Espantildea Manuscrito 1295927

3 laquoEsplicacioacuten sobre en queacute consiste la paz del Almaraquo laquoQuartillas aacute un Alma que padece soledad interiorraquo 7 hojas uacutetiles en 4ordm letra del siglo XVII Biblioteca Nacio-nal de Espantildea Manuscrito 1295828

En cuanto a su persona soacutelo se nos dice que laquose encubrioacute con este seudoacutenimo laquoSor Nadaraquo Esta monja desconocida de origen hispanoamericano posee toda la frescura e ingenuidad de una joven apasionada metida por vocacioacuten u obligacioacuten a ejercer la profesioacuten maacutes comuacuten para mujeres de cierta clase social de su tiempo En sus liacuteneas podemos encontrar un misticismo simple incluso en algunos momentos infantil pero a su vez lleno de una fuerza y sensualidad interior poco comuacuten en escritos de este geacute-nero que desborda los liacutemites del laquoamor divinoraquo a traveacutes de los diaacutelogos entre el Alma y el Esposo Sor Nada consigue proyectar su amor a Dios maacutes allaacute de una experiencia romaacutentica Su experiencia es sincera y genuinamente miacutestica trascendiendo la imita-cioacuten o la propia creacioacuten poeacutetica ficcionalizada (Hatzfeld 30) Algunos pasajes son de un

147 Veacutease mi artiacuteculo Sor Nada ardores divinos de una monja adolescente escritos ineacuteditos de una monja profesa del siglo XVIIraquo Espeacuteculo Revista de estudios literarios 26 (2004) 1-10 Universidad Complutense de Madrid http wwwucmesinfoespeculonumero26sornadahtml

170 JUAN FRANCISCO MAURA

alto contenido eroacutetico con sustantivos y metaacuteforas que recuerdan la maacutes iacutentima unioacuten amorosa en unos casos y el tierno amor maternal en otros

[T]e miro Jesus mio desnudo a las inclemencias del tiempo y ardien-do en puro fuego de Amor por la salud de las Almas y me ensentildeas a que te ame con todo mi corason y puresa de espiritu No atendiendo ni buscando umanos intereses ni a solisitar consuelos ni regalos espi-rituales que suelen empantildear la puresa del noble corason No mi Jesus amable pues antes me ensentildeaste tu puro Amor que desnudo sean [sic] de encaminar mis passos desde el pesebre asta la cuna en donde te miro tan desnudo como el pesebre y todo Sentildeor por mi Amor (Mss 12959 26 hoja 1 v)

El manuscrito (12959 27) de la mencionada serie de tres contiene algunas correccio-nes quizaacute hechas por el confesor o quizaacute por ella misma cuando se dirige con excesiva familiaridad y arrebatado fervor a su Amado148 He escogido el manuscrito (12959 Caja 28) en primer lugar por ser el ejemplo maacutes representativo de su poesiacutea y prosa En este manuscrito encontramos de forma maacutes directa que alegoacuterica toda la frescura de un diaacutelogo entre Jesuacutes y el alma que raya como diriacutea Cervantes laquoa la llana y sin rodeosraquo (667 lib 2 cap 38) con el doloroso y a veces desesperado deseo de la entrega y la unioacuten final con el Amado La ortografiacutea no ha sido corregida respetaacutendose el texto ori-ginal149 Veamos el siguiente fragmento

Mira que te amo con Amor de padre y con Amor de esposo el mas fino y puro enamorado que no tan solo me presio de darte mi mano sino tambien todo mi cuerpo y sangre para que con mi pan de vida te sustentes y te regales a tus anchuras y que con mi propio espiritu vivas en paz como tu lo deseas y que mis amores sean unico alivio en tus trabajos en esta mortal vida pues si esto es asi y sabes que muero por darte vida dime esposa mia de que te fatigas Dame querida tus bras-sos y dime si me amas como yo te amo (Hoja 4)

148 La antologiacutea de Promis ha procurado insertar entre los textos antoloacutegicos algunos que se refieren a la es-critura de mujeres fundamentalmente de aquellos generados en el interior de los espacios conventuales Estos textos se fundan como laquohistorias de vidasraquo y responden casi siempre a los requerimientos de los confesores de las monjas coloniales En este sentido resulta valiosiacutesima la incorporacioacuten de la llamada Relacioacuten autobiograacute-fica de Sor Ursula Suaacuterez como una muestra significativa de la escritura monjil entendida en esta eacutepoca (como tambieacuten en la tradicioacuten europea medieval) inserta en las denominadas laquolabores de manoraquo de las religiosas ya que el texto escrito por mandato se convertiacutea en una suerte de entramado o tejido linguumliacutestico es decir en un nuevo bordado que la mayor parte de las veces el confesor convertido en censor iba haciendo tachando y enmendando En la antologiacutea Promis agrega un texto de Sor Tadea Garciacutea de la Huerta titulado Relacioacuten de la inundacioacuten que hizo el riacuteo Mapocho de la ciudad de Santiago de Chile en el monasterio de Carmelitas titular de San Rafael el diacutea 16 de junio de 1783 se trata de un poema tipo romance escrito en versos octosilaacutebicos y que da cuenta de lo sucedido ese diacutea en el convento (Resentildea de la literatura del reino de Chile de Joseacute Promis Eddie Morales Pintildea httpwwwupaclpublicaciones2002literatura_promishtm)

149 Son frecuentes las faltas ortograacuteficas Una de ellas es el uso constante del seseo La ausencia de acentua-cioacuten y puntuacioacuten exceptuando alguacuten punto o coma arbitrario no seguido casi nunca de mayuacutescula inicial lo mismo que el uso igualmente aribitrario de la h o de b v r q g j m n x etc No olvidemos de la misma forma la laxitud linguumliacutestica existente en el siglo XVII (no sabemos a queacute parte de eacuteste pertenece el manuscrito) asiacute como la joven edad de la monja

171ESPANtildeOLAS DE ULTRAMAR EN LA HISTORIA Y EN LA LITERATURA

Los versos del presente manuscrito poseen la misma fuerza que tiene su prosa Con una estructura estroacutefica indefinida estaacuten aparentemente corregidos por alguien que tu-vo la oportunidad de conocer personalmente a la autora Muy probablemente se trate del padre al que hace referencia al principio del primer manuscrito laquoMandame el Pd que le declare en que consiste un verdadero amor a Diosraquo a continuacioacuten continuacutea con su caracteriacutestica humildad laquo[O]bedesere y dire lo q Dios me inspire segun mi rudesa y simplisidadraquo (Mss 12959 26) En cuanto a la fuerza pasional de esta joven observamos con cierta tristeza coacutemo aparece sublimada en sus escritos con toda la enegiacutea de una joven mujer llena de intensidad y vida pero encerrada en los liacutemites de un convento Veamos un ejemplo en donde responde el Alma en los siguientes versos

O mi enamorado Jesus O mi dulse y tierno amanteO alegria de los sielos O dulse Jesus amable

(Toda Sentildeor me derrito toda Sentildeor me desagoy quiero vivir por ti ea sentildeor abrasadme) [Tachado en el original]

Toda Sentildeor me derrito toda Sentildeor me desagoy quiero morir por vos ea Sentildeor que ya acabo

Ya tus amores me llaman ya tus perfumes me traencon suspiros y agonias Sentildeor hasta que te alcanse

O mi Jesus amoroso no puedo mas dilatarmeya la pasiensia me falta dulse Jesus abrasadme

(No puedo vivir sin vos no puedo mas dilatarmeya la pasiensia me falta dulse) [Tachado en el original]

No puedo vivir sin vos mi dulse Jesus amablepues me teneis echisada siendo mi esposo y mi Padre

Ay que me abraso Ay que me quemo del Amor deJesus nasareno como no tocan y tantildeen a fuego150

Estos versos llenos de arrebato sublimado conectan con toda la tradicioacuten miacutestica es-pantildeola que se remonta a Ramoacuten Llul y que culmina en el maacutes universal de nuestros

150 En toda la fuerza y simbologiacutea del amor maacutes iacutentimo del maacutes alto y sublime placer de la unioacuten de los amantes tal como lo encontramos en el Cantar de los Cantares y en San Juan de la Cruz Leemos en la Biblia

Ya me he quitado la tuacutenica iquestCoacutemo volver a vestirme Ya me he lavado los pies iquestCoacutemo volver a ensuciarlosMi amado metioacute su mano por el agujero (de la llave) y mis entrantildeas se estremecieron por eacutel Me levanteacute para abrir a mi amado Mis manos destilaron mirra y mis dedos mirra exquisita en el pestillo de la cerradura (5 3-5)

Nos ocurre lo mismo con San Juan de la Cruz en su insuperable poema laquoLlama de amor vivaraquo

iexclOh cauterio suaveiexclOh regalada llagaiexclOh mano blanda iexclOh toque delicadoque a vida eterna sabey toda deuda pagaMatando muerte en vida la has trocado

172 JUAN FRANCISCO MAURA

miacutesticos San Juan de la Cruz Esta tradicioacuten se extiende hasta finales del siglo XVII esto es hasta los finales del Barroco siendo un poco maacutes tardiacuteo en la Ameacuterica espantildeola Sin tener como propoacutesito discutir en el presente trabajo a queacute corriente miacutestica pertenece la obra de Sor Nada es necesario resaltar no obstante el hecho de que estaacute escrito por una mujer y ademaacutes de tierna edad El manuscrito 12959 Caja 26 termina con estas pa-labras laquo[T]odas estas boverias escrivi por entretenimiento siendo resien profesa en la religion Sor Nadaraquo Mas no por la juventud de su autora los escritos dejan de tener lo-gradas metaacuteforas imaacutegenes y siacutembolos sacados de la naturaleza La alegoriacutea de la unioacuten matrimonial poseeacute el fuego liacuterico de la maacutes apasionada de las relaciones amorosas vivi-ficada por perfumes flores insectos animales escarchas nieves o abrojos Por lo tanto aunque la narracioacuten destile cierta ingenuidad no carece por ello de un vocabulario rico con el sabor popular de la poesiacutea de los cancioneros y romances de tradicioacuten renacen-tista No ha sido otra mi intencioacuten que la de rescatar del olvido unos escritos en prosa y en verso llenos de frescura y espontaneidad que nos muestran la pasioacuten con que la joven novicia se laquoentrega en cuerpo y almaraquo a los menesteres de su profesioacuten guiada por un padre espiritual en esos primeros antildeos de formacioacuten Esta ha sido la razoacuten por la que presento a continuacioacuten el citado manuscrito en su totalidad

Sor Nada (Mss 1295928)

laquoEsplicacion sobre en que consiste la paz del AlmaraquolaquoQuartillas a un Alma que padece soledad interiorraquo

[7 hojas utiles en 4ordm letra del siglo XVII]

+

Esplicacion sobre en que consiste la paz del Alma

Pareseme segun mi rudo entender que la verdadera paz del Alma con-siste en una muy pura y buena consiencia en un corason liso y bien intensionado en una verdadera rectitud de espiritu en el qual el Alma procura bolar a Dios sin jamas detenerse a respetos umanos ni reparar en que me diran ni de que me censuraran sino me apresuro a seguir a unos entenderes y pareseres dorados en los quales pretende el mundo engantildear y ensuciar si se puede la puresa de un corason unicamente de Dios y de su Santa ley y se lo conserva cristalino con la divina asis-tencia de la gracia y comprendido de su Amor y temor siguiendo la luz divina de tan amante Sentildeor Dios y ombre verdadero con que este ilustrado corason ni se altera ni se mueve por los disfrasses dorados que ase el mundo y sus moradores mayormente con falssas amistades aunque con ellos muestre buena intension Con la misma grasia y luz de Dios conose el buen corason estos disfrasses que le ase el mundo y se retira de todo con espiritu y valor esto sin la menor alterasion sino que en suma paz se retira a buscar a Dios dentro de su mismo corason

173ESPANtildeOLAS DE ULTRAMAR EN LA HISTORIA Y EN LA LITERATURA

y se abrasa con su pura verdad en la qual se le descubren mil interio-res secretos tan solidos puros y verdaderos que la misma Alma queda abismada y de puro grandes no los puede bien comprender ni esplicar pero estos mismos secretos divinos le sirven de espuelas para no solo correr sino bolar con pies de plumas en seguimiento de su bien ama-do Jesus y como este soberano Sentildeor es tan amante de sus espossas las Almas luego que la ve bolar con pies de plumas la sale al encuen-tro en despoblado campo que se deve de llamar Campo de Amor de Dios y el mismo Sentildeor se viene a las manos por ser Dios que nos ama con Amor infinito de Padre benigno y amoroso con que asiendose en contra deso este divino enamorado en lo interyor de el Alma que le busca con ansias de servirle y amarle y en aquella soledad traban una conversasion amorosa y sensilla como la pluma simple de quien esto escrive

Divino enquentroDios y el Alma en la soledad

O Soberano Principe de la paz dise el Alma tus perfumes me traen a ti bolando porque alla en el mundo y sus valedores me pretendian engantildear y entretenerme con pegaminossas amistades que facilmen-te me pudieran envenenar y matarme apartandome de ti Mi dulse Jesus amable mi Redentor Soberano que con tantas ansias me sales al enquentro como siervo [ciervo] erido de mis Amores los quales tu Amor me ofrese para que con tu mismo Amor te ame y te sirva en paz sin perturbarme ni contristarme ni cansarme de padeser pasando si se ofrese por escarchas nieves espinas ni abrojos ni por otros diverssos trabajos ni piedras de contradision que tu me puedes permitir pues por mas que el mar se levante con sus ferosses olas contra mi ni piedras se me tiren al rostro en todo Sentildeor me quieres con serenidad pasifica sin la menor perturbasion Todo Sentildeor quieres que lo tome con Serenidad de espiritu y asi vengo a ti bolando para que mejor me ensentildees a vivir segun las leyes de tu noble condision que me son muy agradables por mas que el mundo me las despresie por segir sus vanidades y torsidas intensiones con apariensias de bien y con este engantildeo y bien me quie-ro mas a mi que no a mi proximo veo que segun mi pareser se pierden muchas Almas y tambien de aquellos que se depresian y pasan por muy espirituales Con que me paresen pocos los que llegan a padeser con desnudes151 de espiritu por tu purisimo Amor y me parese essas se quedan muy atrasadas en la virtud por el peligro de bolver muy atras el paso de modo que se pueden despentildear y pereser en su misma desgra-sia ya por soberbia o por otras enfermedades que se les pega al corason y asi lo pasan como siegos ignorantes sin advertir en sus peligros

151 La letra en cursiva es miacutea

174 JUAN FRANCISCO MAURA

este aquerdo Sentildeor y otros que tu verdad me ensentildea me ase venir uyendo de las paredes del mundo y me vengo a ti Dios mio bolando con las dos Alas del Amor y temor que tu mismo Amor me ofrese tan de gracia y tan de grado que no se duentildeo mio con que lo responder a tan soberano beneficio y finesa de tus entrantildeas de Amorvengo Sentildeor y esposo mio unicamente a descansar en ti pues los peli-gros del camino me an puesto en mucho sobresalto temiendo el per-derte y sin ti perderme para siempre por una eternidad sin fin pues deseo amado mio ganarme ganandote a ti y vivir en ti aora en vida y despues eternamente y estos cuidados me traen fatigada molida y cansada y no podre tener alivio y descanso sino viendome entre tus brassos aunque sea estando en cruz pues ese es el fin de mis deseos vivir y morir en ti ablame mi cordero manso y ensentildeame a que ver-daderamente te ame como fiel esposa ea mi caro amigo dame la ma-no pues sabes Amor mio que en mi no ay mano sin tu misma mano y asi mi Dios y Sentildeor mi Principe Soberano con umilde rendimiento y deseos de alcansarte te suplico me des la mano y me consueles en estos mis trabajos Deseo Sentildeor vivir en paz y los malos amores de mi Naturaleza flaca no me dejan detentar y no quieren por mi desgrasia atropellar con las leyes de tu Amor ni quisiera perturbar mi corason quando me veo con un torvellino de olas y contratiempos que a menu-do me suelen sercar pero si tu Sentildeor me das la mano nada temo sino que me aseguro y vivire en paz sin que me fatiguen los contratiempos pues mi mano en la tuya y mi espiritu en el tuyo por mas borrascas que me envistan no seran bastantes para rendir mi voluntad a la suya bien si para pronunsiar un fiat que resuene bien atras en tus oidos y que en medio de mis fatigas me ponga a cantar tus divinas misericor-dias hea Sentildeor ya pretendo serrar mis labios por no desir mas bove-rias y deseo Sentildeor oir tus palabras de vida eterna abla Sentildeor que tu sierva oye con atension y cuydado mira mi Dios que se me ase tarde y espero con prisa deseando saborearme y aprovecharme de los ecos de tu Santa dotrina pues todas tus palabras saben a eterna vida callen pues mis sentidos y potensias y todo se ponga en paz pues mi dulse y soberano Sentildeor no se escusara de ablar me aun que en mudo silensio hea mi gran Prinsipe de la paz ablame que tus puros amores me traen perdida por estos asperos montes y mis cortos pasos no te pueden dar alcanse mirame mi Dios a tus pies postrada como un vil gusano y me-nor ormiga de la tierraabla Jesus y dise a su esposa el Alma querida esposa mia que me pides y por que te muestras tan fatigada y mal sufrida no vives como corde-rita del campo buscando de mis pechos el sustancial pasto mi Amor no te sustenta y mi grasia te promete eterna vida pues dime amada de que te fatigas y te muestras mal sufrida mira que te amo con Amor de padre y con Amor de esposo el mas fino y puro enamorado que no tan solo me presio de darte mi mano sino tambien todo mi cuerpo y

175ESPANtildeOLAS DE ULTRAMAR EN LA HISTORIA Y EN LA LITERATURA

sangre para que con mi pan de vida te sustentes y te regales a tus an-churas y que con mi propio espiritu vivas en paz como tu lo deseas y que mis amores sean unico alivio en tus trabajos en esta mortal vida pues si esto es asi y sabes que muero por darte vida dime esposa mia de que te fatigas Dame querida tus brassos y dime si me amas como yo te amoResponde el Alma152 Tu mi Dios sabes si yo te amo pues de mi solo se que mis deseos y ansias buelan a ti mas no alcanso a saber si te amo como tu de-seas ser amado y como desconfio tanto de mi y de mis prosederes falssos temo Dios mio perderme y perderte y asi Sentildeor pues no desechas mis Amores y te muestras tan fino en amarme te pido me ensentildees a vivir segun las leyes de tu pura verdad y fina condisionhija mia dise Dios la prueva de un verdadero Amor consiste en sufrir callar y padeser por mi unico Amor y en todo seguir mis pasos sin ja-mas retroseder por mas fragoso que se muestre el camino pues nunca seran tantas las espinas las escarchas ni las nieves ni los vientos bo-rrascosos que te se ofrescan pasar por mi Amor como los que mi tierno y desinteresado Amor paso por ti y siempre con mis pies descalssos y asi hija y esposa mia muestrate costante en seguir lo perfecto de mis passos pues mi braso fuerte sera en ti y peleara por ti y te sera el todo en tus nesesidades y mi Amor te convertira en dulse y suave lo amargo y molesto a la condision de la carrne

Responde el Alma

O mi enamorado Jesus O mi dulse y tierno amanteO alegria de los sielos O dulse Jesus amable

(Toda Sentildeor me derrito toda Sentildeor me desagoy quiero vivir por ti ea sentildeor abrasadme) [Tachado en el original]

Toda Sentildeor me derrito toda Sentildeor me desagoy quiero morir por vos ea Sentildeor que ya acabo

Ya tus amores me llaman ya tus perfumes me traencon suspiros y agonias Sentildeor asta que te alcanse

O mi Jesus amoroso no puedo mas dilatarmeya la pasiensia me falta dulse Jesus abrasadme

(No puedo vivir sin vos no puedo mas dilatarmeya la pasiensia me falta dulse) [Tachado en el original]

No puedo vivir sin vos mi dulse Jesus amablepues me teneis echisada siendo mi esposo y mi Padre

152 La aparicioacuten de una mayuacutescula al principio de una oracioacuten es algo totalmente arbitrario en este ma-nuscrito dada la libertad ortograacutefica de la autora Como se puede observar en la mayor parte de las veces no es el caso

176 JUAN FRANCISCO MAURA

Ay que me abraso Ay que me quemo del Amor deJesus nasareno como no tocan y tantildeen a fuego

Responde Jesus Hija mia tus simples vozes oygo y aunque resuenan bien a mis oidos pero te deseo mas mansa y pasifica en tus fervores ya sabes que no siempre as de vivir en mantillas ni a los pechos de tu Madre por que es rason que padescas con espiritu fuerte como mu-jer valerosa por que a una esposa del Rey soberano y prinsipe de la paz no le estan bien chiquerias ni fervores de nintildea malcriada y ya es ora que la destete su Madre la Naturaleza y que empesando su nueva vida camine con el favor de mi grasia sigiendo mis passos de eterna vida esto con sus pies descalssos segun mis leyes de Amor puro y desinteresado lo tienen ordenado153 y vivir en paz como lo deje en-cargado a mis apostoles Santos repitiendoles varias vezes Vivir en pas y caridad esto es un vivir en Dios y Dios en el Alma y asi hija mia el Alma que vive en paz vive en mi Como mis cortesanos en el cielo y pues me pides que te ensentildee a vivir segun las leyes de mi condision Repito el desir que te debes mostrar sufrida en todo tiempo y estado sin permitir en tu corason que ni aun los fervores se adelanten con estremos ni ademanes sino atiende y aprende de mi purisima Madre pues siempre la veras si bien lo consideras que mientras vivio en el mundo en todos sus trabajos se mostro firme fuerte costante como piedra diamante Pues mirandome nintildeo entre sus brasos desnudo en el pesebre desnudo y crusificado en los brassos de una cruz En estos y otros passos no se mudo su rostro sino que en suma serenidad y pasifico corason toda se sacrificaba enteramente en los brassos de mi Amor y rendido su corason y voluntad en la de mi eterno Padre por ejemplo te la doy y deseo que aprendas de sus nobles calidades pues te aseguro carisima que las leyes de mi condision y pura verdad todo lo allaras enserrado en el corason de mi purisima Madre sedle fiel y descansaras en paz

+

Quartillas a un alma que padese soledad interior

1Un Alma afligida y tristese ve en un campo desiertay en el su esposo la tieneAtormentada y sedienta

153 Es a traveacutes de estas liacuteneas lo que hace suponer que la autora de este diaacutelogo amoroso entre el Alma y Je-suacutes es novicia esto es laquoque estaacute empesando su nueva vidaraquo En las mismas liacuteneas una vez maacutes se hace alusioacuten al laquodesteteraquo de su vida civil laquoa una esposa del Rey soberano y principe de la paz no le estan bien chiquerias ni fervores de nintildea malcriada y ya es ora que la destete su Madre la naturalesaraquo (fol 5)

177ESPANtildeOLAS DE ULTRAMAR EN LA HISTORIA Y EN LA LITERATURA

2Pendiente se ve en el AyreSolo un hilo la sustentasin tocar el pie en el sueloporque del no tome tierra

3Mirandola esta yto a ytoaquel sol que la atraviesay la enviste con sus rayosmas ella no pestantildeea

4Como sigarra padese y como a tal se atormentabatiendo sus mismas Alasy el corason se atraviesa

5Con penas sustos temoresquando se mira assi mesmasin tener valor en nadaporque es la misma flaquesa

6Pero el Amor de su esposotoda su atension le llevay la pone en un abismopero cubierto en tiniebla

7Desea dar algun bueloy subir con ligeresapero se mira travadacon una fuerte cadena

8Clama suspira y padeseMas del todo se sujetaRindiendo su voluntadA la divina clemencia

9Los enemigos del AlmaCruelmente le asen guerray ella aunque firme y constantelos reselos la atormentan

178 JUAN FRANCISCO MAURA

10de todos modos padeseaunque gosa la asistensiadel divino esposo amadoque en su interior se recrea

11Solo de verla penary con verla tan serenadise resibe mil gustosde su sigarra pequentildea

12Le sabe el mundo a mil yelesy su trato le atormentaviendo en el mil falsedadesque todas saben a tierra

13Para poderse librardeja de correr y buelacon las Alas del Amory el mismo Amor se la lleva

Una vida dedicada a un amor divino un amor que le haraacute llenar un buen nuacutemero de cuartillas dedicadas a tan alta empresa Se desconoce si la vocacioacuten de Sor Nada con-tinuoacute con tanta intensidad el resto de sus diacuteas Ciertamente la vida en el covento no era faacutecil En algunos casos la experiencia era traumaacutetica incluso fatal para algunas de las adolescentes de la Ameacuterica Espantildeola Las reglas del claustro eran severas por varias razones Estas joacutevenes si no teniacutean el permiso de la superiora no podiacutean recibir visitas no podiacutean volver a sus casas su correspondencia era censuraba y no podiacutean salir del periacutemetro conventual Igualmente se levantaban antes del amanecer para oir misa tra-bajaban el resto del diacutea y lo maacutes interesante es que muchas veces esta vida era aceptada por muchas

Page 24: Tercera parte: Mujeres en la vida intelectual - …parnaseo.uv.es/Editorial/Maura/TerceraParte.pdf · La Biblia, por su parte, hace repetidas menciones de la mujer y sobre el comporta-

154 JUAN FRANCISCO MAURA

ella o como la mi merced fuese lo cual visto por los de nuestro consejo juntamente con una peticioacuten presentada por dontildea Mariacutea Gudiel muger del dicho Alonso de Tapia por la cual nos suplica lo mismo que acor-dado que debiacutea mandar esta mi ceacutedula para vos por la qual vos mando que no compelaacuteis ni apremieacuteis al dicho Alonso de Tapia a que venga ni enviacutee a estos reinos por la dicha su muger si no fuere a que la pro-vea de lo que fuere necesario para su mantenimiento y deys por libres quales quier fianzas que sobre ello haya dado e no fagades ende al por alguna manera Firmado en la villa de Valladolid a VII diacuteas del mes de febrero de mil e quinientos e treinta y siete antildeos yo el licenciado Con-de de Samano y sentildealada del cardenal Beltraacuten y Carbajal [Aparte en letra pequentildea] Este diacutea se despachoacute una provisioacuten por la cuaacutel su Mag hizo merced a Alonso de Tapia de la veedoriacutea de la provincia de Paria por muerte de Garciacutea de Aguilar con las clausulas ordinarias y con el mismo salario que teniacutea Aguilar Firmado del emperador y de Beltraacuten y Bernal y Velaacutezquez El Rey (Registro de disposiciones Riacuteo Marantildeoacuten AGI Indiferente General Legajo 416 libro 2 Fols 94v y 95r)

El punto maacutes interesante a destacar de todas estas disposiciones oficiales en cuanto a la emigracioacuten femenina al Nuevo Mundo no es otro que la libertad que se da a la mujer de decidir si quiere o no casada o sin casar trasladarse al nuevo continente no como una imposicioacuten sino como un precepto laquoel espiacuteritu de las disposiciones en el sentido de asegurar la vida marital de los casados significa que la mujer que su marido invita a pa-sar a las Indias puede negarseraquo (Villafantildee 127) Habriacutea que ver las opciones laquorealesraquo ade-maacutes de las legales y econoacutemicas que le quedaban a la mujer si tomaba esta decisioacuten

El saber la libertad de eleccioacuten que estas mujeres teniacutean de antemano antes de aden-trarse en las interminables penalidades y aventuras que los viajes de la navegacioacuten tran-soceaacutenica suponiacutean hace que sus hechos y esfuerzos cobren auacuten maacutes relieve En nume-rosas ocasiones estas mujeres cruzaron el oceacuteano una y maacutes veces sin otro motivo que el de defender los derechos e intereses de los suyos Lo que resulta maacutes valioso de todo esto es que lo hicieran por propia iniciativa arriesgando sus vidas para que se hiciese justicia y para que no les faltase lo necesario a aquellos que estaban en la otra orilla Las autoridades vigentes conocedoras de los vaciacuteos legales existentes en las nuevas colo-nias se apresuraron a poner en vigor aquellas normas que redundaran en el beneficio de los menos favorecidos por las circunstancias La institucioacuten del matrimonio cuya trans-cendencia es fundamental en la vida juriacutedica y social de la mujer tuvo que ser legislada en Ameacuterica con una serie de nuevas disposiciones agregados modificaciones y aclara-ciones Asiacute pues la legislacioacuten de base espantildeola tuvo que sufrir en tierras americanas esta serie de cambios por motivos poliacuteticos y sociales (Villafantildee 126)

Para hacer un sumario de lo dispuesto hasta el siglo XVI en cuanto a la legislacioacuten de las mujeres que teniacutean familia o intereses en Indias merece la pena mencionar que existieron una serie de disposiciones que protegiacutean a las mujeres para que eacutestas no se viesen abandonadas por sus maridos En un epiacutegrafe de la Recopilacioacuten de 1680 (libro VII tiacutetulo 3) se deja ver claramente la preocupacioacuten de las autoridades en este asunto laquoDe los casados en Espantildea e Indias que estaacuten ausentes de sus mujeres y esposasraquo (Vi-llafantildee 126-27)

155ESPANtildeOLAS DE ULTRAMAR EN LA HISTORIA Y EN LA LITERATURA

La lista de disposiciones se hace interminable En los reinados de Fernando el Catoacute-lico Carlos V Felipe II Felipe III o incluso Carlos II la insistencia es constante La ra-zoacuten de esta insistencia seriacutea bastante obvia dado que con un oceacuteano por medio seriacutean muchos los que se aprovechasen de llevar una doble vida marital sin el estricto control y vigilancia de sus mujeres que se encontraban en la peniacutensula La ley XXVII libro IX tiacutetulo XXVI determina laquoDeclaramos por personas prohibidas para embarcarse y pasar a las Indias todos los casados y desposados en estos reinos lsquosino llevaren con ellos sus mujeresrsquo aunque sean virreyes oidores gobernadores o nos fuesen a servir en cual-quier cargo y oficios de Guerra Justicia y Hacienda porque es nuestra voluntad que todos los susodichos lleven a sus mujeresraquo (Villafantildee 127) laquoLos eclesiaacutesticos eran los en-cargados de dar cuenta a los tribunales competentes de aquellos que estando casados permaneciacutean en Indias sin sus mujeres Son reiteradas las disposiciones de Fernando el Catoacutelico en este sentidoraquo138 En 1514 el rey don Fernando ordena en una provisioacuten para la isla Espantildeola laquodoy licencia eacute facultad aacute cualquier persona naturales de estos Reynos para libremente se puedan casar con mujeres naturales de esa dicha ysla sin tener que incurrir por ello en pena algunaraquo (Villafantildee 129)

No se debe olvidar tampoco a aquellas mujeres que decidieron pasar a las laquonuevas tierrasraquo solteras Estas mujeres tambieacuten tuvieron un papel importante en el desarrollo de las nuevas colonias Los organismos espantildeoles del momento como los mandatarios indianos y todos los cronistas no dejaron pasar desapercibida la importancia social de estas mujeres en la poliacutetica de poblamiento laquo[E]s cierto que los pueblos de Indias nuevamente poblados no se tienen por fijos o estables ni permanentes hasta tanto que mujeres espantildeolas entren en ellos y los encomenderos y conquistadores se casen por muchas causas y respetos buenos y saludables que para ello hayraquo (Villafantildee 126-27)

Si la intencioacuten era la de una presencia permanente en las tierras americanas la mujer soltera que pasase a ellas siempre seriacutea un motivo maacutes para el colono o conquistador de continuar en el mismo suelo Se podriacutea empezar una familia si asiacute se quisiese sin tener que pensar en volver a la metroacutepoli ya fuese a disfrutar de los bienes adquiridos o a laquobuscarraquo una esposa El problema aparecioacute cuando se produjo un exceso de mujeres solteras lo que de alguna manera alteroacute la estructura social existente ya que no habiacutea muchas opciones para ellas aparte del matrimonio o el convento

En consideracioacuten a que la experiencia habiacutea demostrado que un exce-sivo nuacutemero de mujeres ejerciacutea perniciosa influencia sobre la moral y las costumbres se suplicaba al rey no otorgase a aquellas tantas auto-rizaciones para emigrar al Peruacute La ciudad de la Plata fundada en 1538 emite en 1577 un informe en el que se expone la urgente necesidad de que se funde un convento de monjas pues en el territorio de las Au-diencias de Los Charcas existiacutea un gran nuacutemero de muchachas que no pudieacutendose casar se hallaban en gran peligro de perderse (Konetzke laquoemigracioacutenraquo 149)

138 Solorzano Pereira Juan de Libro Primero de la Recopilacioacuten de las Ceacutedulas Reales Cartas y Provisiones y Or-denanzas Reales Noticia preliminar de Ricardo Levenne Universidad de Buenos Aires Facultad de Derecho Y Ciencias Sociales Pub del Instituto de Historia del Derecho Argentino Coleccioacuten de Textos y Documentos para la Historia del Derecho Argentino t V Buenos Aires Imp de la Universidad de Buenos Aires 1945 (Li-bro I Ley 10 laquoQue los Espantildeoles puedan casar con Indias y al contrario a su voluntadraquo t2 p 138 citado en Villafantildee 129

156 JUAN FRANCISCO MAURA

Entristece ver coacutemo se manejan las cifras de estas mujeres como si de ganado o de bienes suntuarios se tratase Por otra parte existieron irregularidades como la de pobla-doras espantildeolas que vivieron amancebadas con hombres que ya estaban casados en la peniacutensula Normalmente esto ocurriacutea cuando la estancia del conquistador se prolonga-ba maacutes de lo debido en lugares donde habiacutea pocas espantildeolas Muchas veces nacieron hijos de estas uniones que hicieron auacuten maacutes difiacutecil la situacioacuten para las mujeres que esperaban en Espantildea a un marido que ya no teniacutea ningunas intenciones de volver En los juicios de residencia los documentos acostumbran a citar estos casos ya que era parte de su obligacioacuten castigar las irregularidades extramatrimoniales y salvaguardar las buenas costumbres familiares que con tanto intereacutes se deseaba mantener laquoUn ejemplo nos lo da la isla de Cuba donde en 1532 viven con hombres casados Olalla Hernaacuten-dez Santillana Aranda lsquola Cordobesarsquo Catalina de Leoacuten Catalina Saacutenchez Francisca Hernaacutendez Mayor de Azebedo Juana de Valeros y lsquouna mujer que estaba en casa de Ayalarsquoraquo (Borges 416)

Estos casos no fueron aislados y mucho menos en Cuba centro neuraacutelgico de todo el movimiento de ida y vuelta entre la metroacutepoli y el Nuevo Mundo Estas ocho acusa-ciones por lo tanto no tienen porqueacute considerarse extraordinarias y menos en el lugar maacutes cosmopolita de las Indias en esos momentos al que llegaban flotas a cada momen-to Al parecer existieron casos parecidos en el Riacuteo de la Plata Peruacute y Nueva Espantildea (Ratcliffe 347) El margen legal para que estas mujeres viviesen como quisiesen estuvo limitado por una moral que veiacutea uacutenicamente en el matrimonio o el convento una salida laquovaacutelidaraquo para que fueran aceptadas socialmente Los hombres en iguales circunstan-cias fueron juzgados por una laquomoralraquo mucho maacutes permisiva

La mujer y el cuerpo eclesiaacutestico

Pues iquestquieacuten diablos os traiacutedo aquiacute dijo don Quijote siendo hombre de la iglesia iquestQuieacuten sentildeor replicoacute el caiacutedo laquomi desventuraraquo Pues otra mayor os amenaza dijo don Quijote sino me satisfaceacuteis a todo cuanto primero os pregunteacute (Cervantes Don Quijote )

Otro factor a tener en cuenta en un anaacutelisis sobre la presencia de la mujer en el Nuevo Mundo es el que tiene que ver con la institucioacuten maacutes importante de las que llegaron desde Europa la iglesia catoacutelica Sin aacutenimo de criticar a tan compleja institucioacuten res-ponsable de gran parte de los aconteceres en el Nuevo Mundo vale la pena analizar algunas singularidades Muchos de sus miembros fueron grandes ejemplos de valor e inteligencia a la hora de tratar los maacutes variados y escabrosos asuntos con los que se encontraron los cristianos en la otra orilla durante este periacuteodo Se debe resaltar tam-

157ESPANtildeOLAS DE ULTRAMAR EN LA HISTORIA Y EN LA LITERATURA

bieacuten su caraacutecter medieval en la manera de hacer apostolado y de entender y tratar a los potenciales cristianos Si se tienen en cuenta los privilegios y prerrogativas que algunas de las altas jerarquiacuteas eclesiaacutesticas tuvieron no seriacutea superfluo estimar que un respeta-ble porcentaje de la poblacioacuten de origen laquodudosoraquo muy bien podiacutea venir de la misma iglesia Fueron muchas las viacutectimas y muchas las familias divididas por un padre laquoinvi-sibleraquo Gran parte de los hijos o laquosobrinosraquo de estos sacerdotes pasaron a ocupar cargos similares incluyendo los privilegios que estos cargos llevaban consigo como si se trata-se de cualquier otro oficio gremial transmitido generacionalmente regla tan comuacuten en la Europa medieval Todaviacutea a finales del siglo XIII en Espantildea los derechos de los hijos y nietos de los sacerdotes estaban protegidos por la ley sin que hubiesen podido ser erradicados por las reformas gregorianas (Ratcliffe 347)139

Las letras espantildeolas ya se haciacutean eco de estos lances amorosos entre representantes de la Iglesia y ciertas damas del lugar desde los tiempos del poeta riojano Gonzalo de Berceo En su obra maacutes conocida Los milagros de Nuestra Sentildeora Berceo describe con un realismo ingenuo y sencillo relatos de humor y de humanismo sobre aquellos hombres de carne y hueso que eran perdonados por la intercesioacuten de la Virgen Mariacutea Juan Ruiz por su lado haraacute de su Libro de buen amor la obra maacutes representativa en este sentido Seriacutea prolijo recordar la actuacioacuten de la Iglesia durante diversos periacuteodos de la Edad Media no soacutelo en Espantildea sino en toda Europa En la Espantildea musulmana del siglo XII concretamente en Sevilla el comportamiento de los representantes de la iglesia cristia-na (mozaacuterabe) en territorio islaacutemico es duramente criticado por el sevillano Ibn Abdun Este precioso documento muestra el estricto control y falta de confianza que existiacutea sobre la mujer prohibieacutendolas que entrasen en las laquoabominablesraquo iglesias cristianas

porque los cleacuterigos [cristianos] son libertinos fornicadores y sodomi-tas Asimismo debe prohibirse a las mujeres francas que entren en la iglesia maacutes que en diacuteas de funcioacuten o fiesta porque alliacute comen beben y fornican con los cleacuterigos y no hay uno de ellos que no tenga dos o maacutes de estas mujeres con que acostarse Han tomado esta costumbre por haber declarado iliacutecito lo liacutecito y viceversa Convendriacutea pues mandar a los cleacuterigos que se casasen como ocurre en Oriente y que si quie-ren lo hagan (Leacutevi-Provenccedilal 150)

Pese a existir una convivencia paciacutefica durante gran parte de la Edad Media entre los tres credos monoteiacutestas de Espantildea (cristianos musulmanes y judiacuteos) esto no suponiacutea que no existiese desprecio y desconfianza entre estos grupos religiosos Dice Abdun resaltando el peligro que suponiacutea que una mujer entrase en casa de un cleacuterigo cristiano de vida ceacutelibe

No debe tolerarse que haya mujer sea vieja o no en casa de un cleacuterigo mientras eacuteste rehuacutese casarse Obliacutegueseles ademaacutes a circuncidarse co-mo les obligoacute al-Mutadid pues si a lo que dicen siguen el ejemplo de Jesuacutes (iexclDios les bendiga y salve) Jesuacutes se circuncidoacute y precisamente ellos que han abandonado esta praacutectica tienen una fiesta que celebran solemnemente el diacutea de su circuncisioacuten (Leacutevi-Provenccedilal 150-151)

139 Valdriacutea la pena ver si han cambiado mucho las cosas desde hace quinientos antildeos a esta parte o si in-cluso la iglesia moderna ha retrocedido en tolerancia en cuanto a las relaciones sexuales de los representantes de la Iglesia

158 JUAN FRANCISCO MAURA

El historiador argentino Germaacuten Arciniegas recoge un pasaje ilustrativo de lo men-cionado anteriormente pero trasladado al ambiente de la colonia diciendo que incluso en poblaciones pequentildeas como Santa Fe con poco maacutes de un convento y una ermita la fragilidad de la carne enredaba a frailes soldados y virreyes por igual laquoEl buen So-liacutes que murioacute en olor de santidad con la cabeza reclinada sobre un par de ladrillos y en saya de franciscano cruzaba en las noches el solar de su palacio para ir a besar a la Marichuelaraquo (118-19)

Arciniegas recoge tambieacuten un suceso aparecido en el diario de Lima en 1667 que no tuvo que ser extraordinario durante los primeros antildeos de la colonia laquoEl fraile carmelita mdashGrande hereje y siendo sacerdote deciacutea misa gran perro lujurioso deshonesto que relatando sus maldades dijo que en cierta ciudad habiacutea conocido carnalmente a maacutes de trescientas y sesenta mujeres y en un convento de monjas habiacutea cometido muchos sacrilegios Este lo trujeron preso de Buenos Aires por Chileraquo (119)

Las controversias de la iglesia moderna sobre las relaciones que los eclesiaacutesticos de-ben tener con el sexo femenino parece que no han encontrado todaviacutea respuesta Sigue existiendo miedo y recelo a que la mujer comparta no soacutelo poder en la jerarquiacutea de la iglesiacutea sino en la vida privada de los miembros de la institucioacuten En la Nueva Espantildea el primer obispo de Meacutexico Juan de Zumaacuterraga viendo en la mujer un ser de tentacioacuten irresistible prohibioacute terminantemente la presencia de eacutestas en su casa Ni siquiera para su limpieza y aseo El franciscano Juan de Torquemada se refiere a este comportamien-to como una de las virtudes del popular obispo

Fue este benditiacutesimo prelado muy amigo de la virtud y de virtuosos y aceacuterrimo reprehendedor de vicios y viciosos y tan enemigo de la ociosidad que no permitiriacutea que alguno de su casa estuviese ocioso fue amiciacutesimo de la limpieza por lo cual jamaacutes consintioacute que mujer alguna entrase en su casa aunque fuese necesaria al servicio de ella ni nunca consintioacute que por alguna ocasioacuten subiese mujer a lo alto y aposentos de ella antes lo teniacutea todo cerrado como un monasterio porque sabiacutea (como quien tambieacuten sabiacutea) que la ocasioacuten suele derribar los maacutes fuertes y robustos corazones (450 lib 20 cap 31)

No fueron uacutenicamente miembros de la iglesia catoacutelica los que valoraron la lucha con-tra la tentacioacuten siguiendo al pie de la letra el crudeliacutesimo refraacuten laquoentre santa y santo pared de cal y cantoraquo Se tienen algunas noticias de la vida social de los primeros tiem-pos de la colonia En estos documentos se puede observar coacutemo no distaban mucho las oacuterdenes que se dictaban en la metroacutepoli y las que se llevaban a cabo en la Nueva Espantildea La vida social tanto de damas como de algunos miembros de la iglesia de las colonias era maacutes laquorelajadaraquo de lo que las normas permitiacutean Gracias a la informacioacuten ofrecida por Manuel Romero de Terreros disponemos de los nombres de las primeras virreinas

Las esposas de los primeros cinco Virreyes Don Antonio de Mendoza Don Luis de Velasco Don Gastoacuten de Peralta Don Martiacuten Enriacutequez de Almanza y Don Lorenzo Suaacuterez de Mendoza Conde de la Coruntildea fueron respectivamente Dontildea Caterina de Vargas Dontildea Ana de Cas-tilla y Mendoza hija de Don Diego de Castilla Sentildeor de Gor y Caba-

159ESPANtildeOLAS DE ULTRAMAR EN LA HISTORIA Y EN LA LITERATURA

llerizo de Carlos V Dontildea Leonor de Vieo Dontildea Mariacutea Manrique hija del Marqueacutes de Aguilar y Dontildea Catalina de la Cerda hija del segundo Duque de Medinaceli (Romero 2)

Existen noticias concretas de la seacuteptima virreina de la Nueva Espantildea (1586) dontildea Blanca de Velasco marquesa de Villamanrique En ellas destaca lo anteriormente men-cionado sobre la falta de tolerancia existente en aquellos tiempos difiacutecilmente com-prensible si no fuera por fragmentos esporaacutedicos conservados sobre la vida colonial en la Nueva Espantildea En la siguiente Relacioacuten hecha por autores anoacutenimos sobre la visita que hizo Fray Alonso Ponce Comisario General de la Orden Seraacutefica a las provincias de la Nueva Espantildea se mencionan las eneacutergicas medidas que con los miembros de su orden en su opinioacuten de moral laquomuy relajadaraquo tomoacute este religioso Tambieacuten aparecen mencionadas sus relaciones con la Virreina

Captoacutese ademaacutes la enemistad del gobernante y de la Virreina Dontildea Blanca de Velasco hija del cuarto Conde de Nieva sentildeora seguacuten pare-ce de conducta ligera y caraacutecter maacutes que dominante laquoPor este mismo tiempo (septiembre de 1586) fueron el Virey y la Vireyna a holgarse y recrearse en la cibdad de Xochimilco Posoacute con toda su casa dentro de nuestro convento en un dormitorio deacutel y detuacutevose alliacute siete u ocho diacuteas en que los indios les hicieron grandes fiestas aunque les costaron caras porque en una dellas murieron dos o tres dellos con un tiro que se disparoacute y reventoacute y al principal indio de aquella cibdad hirieron muy malraquo (Romero 3-4)

A pesar del riacutegido control eclesiaacutestico y civil que habiacutea en la Nueva Espantildea existieron tambieacuten pareacutentesis en los que incluso miembros de la iglesia y mujeres mdashhumanos al fin y al cabomdash pudieron disfrutar de algunos momentos de regocijo y alegriacutea Con-tinuando con la cita anterior el mismo autor se queja del laquoexcesoraquo de libertad en los frailes que se suponiacutea que teniacutean que profesar una extremada pobreza y no digamos castidad En primer lugar se describen pormenorizadamente la abundancia en el tipo y cantidad de comida de toda clase dulces y vino que se consumieron con largueza y generosidad durante aquellas fiestas Pero lo que maacutes indigna al autor (o autores) fue que llegasen a entrar mujeres en el convento

y aunque todo esto es malo delante de Dios y delante de los hom-bres lo que maacutes mal parecioacute y de que todo el mundo tuvo que mur-murar fueacute la demasiada libertad rotura y disolucioacuten que hubo en en-trar y estar muy de propoacutesito mujeres no soacutelo la Vireyna y las suyas sino otras muchas dentro del dicho convento y andar por las celdas como si fuese cosa profana y como si no hubiera breve apostoacutelico que soacute graves penas y censuras prohibe estas entradas y como si a los frai-les no los comprendiera el dicho breve por admitirlas y no estuviera asiacute declarado y mandado por nuestros estatutos generales de Toledo (Romero 4-5)

La preocupacioacuten por las laquotentaciones de la carneraquo fuera del matrimonio siempre es-tuvo en la mente de los religiosos espantildeoles asiacute como de otras nacionalidades y reli-

160 JUAN FRANCISCO MAURA

giones que intentaban vanamente erradicar algo tan intriacutenseco al ser humano como a cualquier otra especie animal Esta preocupacioacuten se acentuoacute mucho maacutes en el Nuevo Mundo donde muchas sociedades tribales no veiacutean a la mujer como parte integrante de su propiedad privada La razoacuten es obviamente socioloacutegica y ha existido desde el principio de los tiempos en las civilizaciones maacutes primitivas laquoNo desearaacutes a la mujer del proacutejimoraquo El quebrantar este precepto equivaldriacutea a desestabilizar desde su base a la sociedad judeo-cristiana fundamentada en la familia Las penas aplicadas en estas transgresiones seraacuten lo suficientemente severas como para marginar socialmente mdashen el mejor de los casosmdash a aquellos que las pongan en praacutectica Siendo la mujer la encar-gada por la naturaleza de trasmitir la descendencia de la especie su libertad sexual se veraacute limitada por el peligro de quedar embarazada cada vez que ignore tal elemental precepto140

Primeras escritoras del Nuevo Mundo

Contra cuerdos y contra locos estaacute obligado cualquier caballero andante a volver por la honra de las mujeres cualesquiera que sean Cuanto maacutes por las reinas de tan alta guisa y pro como fue la reina Madaacutesima a quien yo tengo particular aficioacuten por sus buenas partes porque fuera de haber sido fermosa ademaacutes fue muy prudente y muy sufrida en sus calamidades que las tuvo muchas (Cervantes Don Quijote)

Fueron varias las escritoras que durante los siglos XVI y XVII tuvieron una relacioacuten di-recta o indirecta con el Nuevo Mundo Muchas de ellas eligieron la vida monaacutestica mdashen algunos casos como refugio huyendo de sus maridosmdash uacutenica salida en una estructura social en donde no eran muchas las opciones especialmente en una eacutepoca donde el fac-tor religioso pesaba casi tanto como el econoacutemico pero sobre todo para dedicarse a una vida espiritual difiacutecilmente alcanzable en otras circunstancias Mariloacute Vigil apunta que las monjas que lo eran por su propia voluntad ademaacutes de tener inquietudes religiosas tambieacuten las teniacutean intelectuales como es el caso de la escritora miacutestica espantildeola Santa Teresa de Jesuacutes (1515-1582) que ademaacutes de tener una de las vidas maacutes interesantes que se conozcan supo sacar tiempo para escribir las maacutes bellas manifestaciones de la poesiacutea liacuterica y sobre todo de la prosa castellana (Vigil 237-38) Cada una de estas mujeres de-dicadas a la vida literaria y espiritual de su tiempo se merece muchiacutesimo maacutes espacio del que se les pueda ofrecer en estas pocas liacuteneas No obstante con estas pasajeras men-

140 Aunque afortunadamente las cosas han cambiado para la mujer no se debe dejar de mencionar la can-tidad de abusos sexuales de la que es viacutectima en la sociedad moderna

161ESPANtildeOLAS DE ULTRAMAR EN LA HISTORIA Y EN LA LITERATURA

ciones se espera al menos incluirlas y poder despertar el suficiente intereacutes para que sus vidas y sus obras no sigan sumergidas en las simas del olvido Para que estas mujeres de la iglesia pudiesen satisfacer su curiosidad cognoscitiva era necesario romper todas aquellas barreras que supusiesen un estorbo o una restriccioacuten a la hora de investigar consultar o hablar con cualquier persona religiosa de cualquier orden o secular ya fue-se obispo o cleacuterigo Las posiciones intelectuales entre las diferentes oacuterdenes religiosas fueron muy dispares como bien es sabido No eran iguales los planteamientos teoloacute-gicos de los dominicos que los de los franciscanos o los de los carmelitas que los de los agustinos o jesuitas Era necesario por lo tanto tener acceso a estas fuentes de informa-cioacuten para poder constrastar las diferencias y hacer valoraciones propias (Vigil 237-38) El escritor espantildeol Caro Baroja destaca el caraacutecter enciclopeacutedico del catolicismo donde se han integrado corrientes y posturas muy dispares que a traveacutes del diaacutelogo daban cierto espacio al creyente con maacutes curiosidad intelectual para que este pudiese compa-rar y valorar las diferentes opciones que se le ofreciacutean (Vigil 237-38)

Varias de estas mujeres intelectuales fueron hijas de conquistadores que aunque na-cidas en suelo americano seguiacutean expresaacutendose en la lengua de sus padres con no me-nos fuerza que sus contemporaacuteneas peninsulares Es cierto que existieron numerosas escritoras en el Nuevo Mundo durante el siglo XVIII algunas dedicadas incluso al estudio de las matemaacuteticas como la mexicana Dontildea Francisca Gonzaga y Castillo Pero para limitar el presente trabajo a los siglos XVI y XVII uacutenicamente se incluiraacuten ejemplos de estos dos siglos

La peruana Josefa de Alarcoacuten publicoacute en 1648 unas liras dedicadas a las Exequias del Priacutencipe Baltasar Carlos

Cifro en capilla breveEl tribunal de la Magestad maacutes graveEn fe de lo que debeA Carlos que en dos mundos no cabe141

El caso de Sor Jeroacutenima de la Asuncioacuten es muy interesante una mujer que tuvo la oportunidad de viajar a Meacutexico y posteriormente a las Filipinas para cumplir con las mi-siones que le habiacutean sido encomendadas por su orden Nacida en Toledo en 1555 en el seno de una noble y acaudalada familia estuvo destinada a recorrer el mundo ofrecien-do sus servicios a todos los necesitados distinguieacutendose por su ardiente caridad laquovien-do que los galeotes eran tratados con dureza excesiva sobre todo cuando los llevaban de un pueblo a otro procuroacute aliviar las penas de aquellos desgraciados y lo consiguioacute en parteraquo (Serrano y Sanz 268 65) Hija del licenciado e ilustre jurista Pedro Garciacutea Yaacute-ntildeez y de dontildea Catalina de la Fuente ingresoacute contra su voluntad en el monasterio de las Clarisas de Santa Isabel de los Reyes (Toledo) el 5 de agosto de 1570 (Trevintildeo 46) hay que decir que eacutesta no seraacute la uacutenica voluntad contra la que tuvo que luchar

Sor Jeroacutenima se embarcoacute para Meacutexico y de alliacute partioacute hacia Manila junto con siete compantildeeras en el famoso laquoGaleoacuten de Manilaraquo que saliacutea anualmente del puerto mexi-cano de Acapulco Su viaje a las Filipinas duroacute un antildeo y tres meses desde su salida de Espantildea tiempo en el que demostroacute un gran valor y determinacioacuten por el soacutelo hecho de

141 Manuel Serrano y Sanz Apuntes para una biblioteca de escritoras espantildeolas desde el antildeo 1401 al 1833 vols 268 269 270 271 Biblioteca de Autores Espantildeoles (Madrid Atlas 1975) 268 19

162 JUAN FRANCISCO MAURA

embarcarse en tan precarias naves Fue la primera misionera de Oceaniacutea muriendo en Manila en 1621 Alliacute fundoacute el monasterio de Santa Clara que perviviriacutea hasta ser bom-bardeado en la Segunda Guerra Mundial (Trevintildeo 47) Escribioacute su Vida donde trata de la fundacioacuten del convento y de todas las tribulaciones mdashllegoacute a ser excomulgadamdash y satisfacciones que una vida dedicada a una causa justa proporciona Tambieacuten escribioacute una obra de caraacutecter filosoacutefico-teoloacutegico titulada Carta de marear en el mar del mundo nombre alegoacuterico que da cuenta de la enorme distancia recorrida a traveacutes del laquomar del espiacuterituraquo por sor Jeroacutenima He aquiacute algunos de sus versos de caraacutecter religioso

Vuestra soy para vos naciacuteiquestQueacute mandaacuteis hacer de miacute Inaccesible grandezaEterna Sabiduriacuteay bondad del alma miacuteaDios un ser poder y Altezamirad la suma pobrezade eacutesta que se ofrece aquiacuteiquestQueacute mandaacuteis hacer de miacute (Serrano y Sanz 268 66)

Ya en Meacutexico tenemos otro ejemplo de una mujer dedicada por completo a Dios y al estudio y composicioacuten de obras de caraacutecter teoloacutegico Dontildea Ana Mariacutea del Costa-do de Cristo nacida en la ciudad de Tlaxcala hacia el antildeo 1650 Tomoacute la orden de San Francisco para consagrarse a las labores de su orden y a la escritura Se dice que con los escritos de Dontildea Ana Mariacutea se podriacutean formar veinte tomos (Serrano y Sanz 268 282) Estas son algunas de sus obras Vida y muerte de Jesucristo Nuestro Sentildeor Vida del Seraacutefico Padre San Francisco de Asiacutes Vida de la iacutenclita Virgen Santa Clara Vida del sutiliacutesimo doctor Juan Duns Escoto

Pero no todas las monjas tuvieron vidas tan dedicadas al estudio y la oracioacuten Loacutegica-mente entre un nuacutemero tan grande de mujeres existioacute de todo y seriacutea un error pensar que todos los conventos femeninos estaban integrados por laquocaacutendidas palomasraquo Una monja en el siglo XVI y XVII teniacutea mucha maacutes fuerza que una mujer ordinaria ya que actuaban en grupo y la entrada a los recintos donde viviacutean estaba permitida solo a mu-jeres Esta situacioacuten las haciacutea mucho maacutes fuertes a todos los niveles que una mujer sola protegida uacutenicamente por su familia laquoLas monjas durante los siglos XVI y XVII lucharon por eludir la clausura y por zafarse del control que los frailes de las secciones masculi-nas de sus congregaciones ejerciacutean sobre ellasraquo (Vigil 230) Soacutelo un antildeo maacutes tarde que dontildea Ana Mariacutea del Costado de Cristo en 1651 y a 12 leguas de Meacutexico nacioacute la sin par Sor Juana Ineacutes de la Cruz hija de don Pedro Manuel de Asbaje natural de Vergara (Vizcaya) y de Dontildea Isabel Ramiacuterez de Santillana hija de espantildeoles (Serrano y Sanz 268 289) Por ser sin lugar a dudas la poeta maacutes importante de su tiempo y probable-mente la maacutes conocida del mundo hispano no profundizaremos en ella Su obra es un canto a la inteligencia y el exponente maacutes destacado de la literatura barroca americana tanto en prosa como en verso Destacareacute simplemente que Sor Juana Ineacutes pese a vivir en un sociedad donde no eran excesivas las libertades concedidas a las mujeres tuvo el caraacutecter y la determinacioacuten de dejarnos las maacutes bellas poesiacuteas amorosas que si bien estuvieron enmarcadas en un ambiente religioso como era de esperar por su condicioacuten

163ESPANtildeOLAS DE ULTRAMAR EN LA HISTORIA Y EN LA LITERATURA

pudieron transcender como unas de las maacutes bellas manifestaciones literarias que hoy en diacutea se conservan Fue su agudeza mental sensibilidad y cultura tal que no fueron suficientes los soacutelidos muros del convento para contener el genio de tan extraordinaria mujer Recordemos sus conocidiacutesimos versos en defensa de las mujeres

Hombres necios que acusaacuteisa la mujer sin razoacutensin ver que sois la ocasioacutende lo mismo que culpaacuteis142

Las metaacuteforas y la delicadeza que emplea en rebatir a su obispo en su laquoRespuesta a sor Filotea de la Cruzraquo no son solamente el epiacutetome del feminismo de su tiempo sino una de las maacutes brillantes manifestaciones del barroco hispano Poesiacutea teatro ensayo y un conocimiento extraordinario de las ciencias claacutesicas de su tiempo hacen de esta mujer un ejemplo extraordinario de las letras universales Ya son cientos los artiacuteculos y libros que se han escrito sobre Sor Juana y no dejan de aparecer tesis doctorales sobre los maacutes diversos temas conectados con la citada autora143 Como nos dice Stephanie Merrim en su documentada obra Early Modern Womenrsquos Writing and Sor Juana Ineacutes de la Cruz

She wrote and published on secular themes as atypical for a nun as human love Her remarkably extensive writings essayed and reenacted most of the (male) poetic dramatic theological and even philosophi-cal discourses of her times in the metropolis making her works a com-pendium of baroque culture in its diversity and syncretism Sor Juana self-creation as a learned women effectively toppled many of the walls in which she was materially enclosed and positioned her within the dynamic world of early modern European culture (xii)

No se debe dejar de mencionar a otras escritoras novohispanas de la eacutepoca que aun-que no fueron tan proliacuteficas y relevantes como Juana Ineacutes de la Cruz dejaron testimo-nio de algunos acontecimientos que tienen intereacutes socioloacutegico o testimonial Este es el caso de Dontildea Mariacutea Estrada Medinilla de igual nombre y apellido que la mujer que acompantildeoacute a las tropas de Corteacutes en su primera entrada a Meacutexico Natural de Meacutexico publicoacute toda su obra a mediados del siglo XVII concentraacutendose principalmente en la lle-gada del Marqueacutes de Villena virrey y capitaacuten general de la Nueva Espantildea a la ciudad de Meacutexico en el antildeo 1640 Escrita en octavas reales la obra trata de las fiestas de toros y cantildeas con que se obsequioacute al citado virrey Fue impresa en Meacutexico en 1641 (Serrano y Sanz 269 402)

Mucho maacutes importante para el presente libro es Dontildea Isabel de Guevara que escribioacute en 1556 la carta en que se expone la ayuda que ofrecieron las mujeres en el descubri-miento y conquista del Riacuteo de la Plata No cabe la menor duda de que esta carta es uno

142 Para una mejor comprensioacuten del caraacutecter de esta excepcional mujer veacutease entre los numeros trabajos publicados Fredo Arias de la Canal Intento de psicoanaacutelisis de Juana Ineacutes y otros ensayos sorjuanistas (Meacutexico Frente de Afirmacioacuten Hispanista 1972) 47

143 Veacuteanse entre otros trabajos Octavio Paz Sor Juana Ineacutes de la Cruz o las trampas de la fe Georgina Sabat de Rivers En busca de Sor Juana Margo Glantz Sor Juana la comparacioacuten y la hipeacuterbole Gerard C Flynn Sor Juana Ineacutes de la Cruz Stephanie Merrim Feminist perspectives on Sor Juana Ineacutes de la Cruz Pamela Kirk Sor Juana Ineacutes de la Cruz religion art and feminism

164 JUAN FRANCISCO MAURA

de los documentos maacutes importantes con que contamos en relacioacuten a la aportacioacuten fe-menina en el proceso de la conquista de Ameacuterica Su importancia viene dada por varios factores Primero es uno de los primeros testimonios mdashsi no el primeromdash en donde se expone abiertamente la indispensable colaboracioacuten de las mujeres en el descubrimien-to y conquista de tierras en el Nuevo Mundo laquoQue si no fuera por ellas todos fueran acabadosraquo En segundo lugar la informacioacuten vertida en estas liacuteneas presenta en parte la manera de pensar de una mujer espantildeola en tales circunstancias Extraordinario tes-timonio de primera mano que nos da una idea de lo que significoacute en muchos casos el valor y entrega constantes de muchas de estas mujeres que auacuten a riesgo de perder sus vidas no dudaron en luchar al lado de los hombres por una causa que consideraban laquocomuacutenraquo

La relevancia histoacuterica de dicha carta hace que merezca ser transcrita en su totali-dad

Carta de dontildea Isabel de Guevara a la princesa gobernadora dontildea Juana exponiendo los trabajos hechos en el descubrimiento y conquista del Riacuteo de la Plata por las mujeres para ayudar a los hombres y pidiendo repartimiento

para su marido Asuncioacuten 2 de julio de 1556

Muy alta y muy poderosa sentildeora

A esta provincia del Riacuteo de la Plata con el primer gobernador de ella don Pedro de Mendoza hemos venido ciertas mujeres entre las cuales ha querido mi ventura que fuese yo la una y como la armada llegase al puerto de Buenos Aires con mil quinientos hombres y les faltase el bastimento fue tamantildea el hambre que a cabo de tres meses murie-ran los mil esta hambre fue tamantildea que ni la de Jerusalem se le puede igualar ni con otra ninguna se puede comparar Vinieron los hombres en tanta flaqueza que todos los trabajos cargaban de las pobres mu-jeres asiacute en lavarles las ropas como en curarles hacerles de comer lo poco que teniacutean limpiarlos hacer centinela rondar los fuegos armar las ballestas cuando algunas veces los indios les veniacutean a dar guerra hasta cometer a poner fuego en los versos y a levantar los soldados los que estaban para ello dar arma por el campo a voces sargentean-do y poniendo en orden los soldados porque en este tiempo como las mujeres nos sustentamos con poca comida no habiacuteamos caiacutedo en tanta flaqueza como los hombres Bien creeraacute V A que fue tanta la so-licitud que tuvieron que si no fuera por ellas todos fueran acabados y si no fuera por la honra de los hombres muchas maacutes cosas escribiera con verdad y los diera a ellos por testigos Esta relacioacuten bien creo que la escribiraacuten a V A maacutes largamente y por eso cesareacute Pasada esta tan peligrosa turbunada determinaron subir el riacuteo arriba asiacute flacos como estaban y en entrada de invierno en dos bergantines los pocos que quedaron vivos y las fatigadas mujeres los curaban y los miraban y les guisaban la comida trayendo la lentildea a cuestas fuera del naviacuteo y animaacutendolos con palabras varoniles que no se dejasen morir que presto dariacutean en tierra de comida metieacutendolos a cuestas en los

165ESPANtildeOLAS DE ULTRAMAR EN LA HISTORIA Y EN LA LITERATURA

bergantines con tanto amor como si fueran sus propios hijos Y como llegamos a una generacioacuten de indios que se llaman tinbues sentildeores de mucho pescado de nuevo los serviacuteamos en buscarles diversos modos de guisados porque no les diese en rostro el pescado a causa de que lo comiacutean sin pan y estaban muy flacos Despueacutes determinaron subir el Paranaacute arriba en demanda de bastimento en el cual viaje pasaron tanto trabajo las desdichadas mujeres milagrosamente quiso Dios que viviesen por ver que en ellas estaba la vida de ellos porque todos los servicios del naviacuteo los tomaban ellas tan a pechos que se teniacutea por afrentada la que menos haciacutea que otra sirviendo de marear la vela y gobernar el naviacuteo y sondar de proa y tomar el remo al soldado que no podiacutea bogar y escotar144 el naviacuteo y poniendo por delante a los soldados que no se desanimasen que para los hombres eran los trabajos verdad es que a estas cosas ellas no eran apremiadas ni las haciacutean de obliga-cioacuten ni las obligaba si solamente la caridad Asiacute llegaron a esta ciudad de la Asuncioacuten que aunque ahora estaacute muy feacutertil de bastimentos en-tonces estaba de ellos muy necesitada que fue necesario que las muje-res volviesen de nuevo a sus trabajos haciendo rosas con sus propias manos rosando y carpiendo y sembrando y recogiendo el bastimento sin ayuda de nadie hasta tanto que los soldados guarecieron de sus fla-quezas y comenzaron a sentildeorear la tierra y adquirir indios e indias de su servicio hasta ponerse en el estado en que ahora estaacute la tierra He querido escribir y traer a la memoria de V A para hacerle saber la ingratitud que conmigo se ha usado en esta tierra porque al presente se repartioacute por la mayor parte de los que hay en ella asiacute de los anti-guos como de los modernos sin que de miacute y de mis trabajos se tuviese ninguna memoria y me dejaron de fuera sin me dar indio ni ninguacuten geacutenero de servicio Mucho me quisiera hallar libre para me ir a presen-tar delante de VA con los servicios que a SM he hecho y los agravios que ahora se me hacen mas no estaacute en mi mano porque estoy casada con un caballero de Sevilla que se llama Pedro de Esquivel que por servir a SM ha sido causa que mis trabajos quedasen tan olvidados y se me renovasen de nuevo porque tres veces le saqueacute el cuchillo de la garganta como allaacute VA sabraacute A que suplico mande me sea dado mi repartimiento perpetuo y en gratificacioacuten de mis servicios [en el origi-nal del AHN Diversos doc 141 dice ademaacutes mande que sea proveydo mi marido de alguacuten cargo conforme a la calidad de su persona pues el de su parte por sus servicios lo merece] lo merece Nuestro sentildeor acre-ciente su Real vida y estado por muy largos antildeos De esta ciudad de la Asuncioacuten y de julio 2 1556 antildeosServidora de V A que sus Reales manos besa

Dontildea Isabel Guevara

144 Sacar agua de un riacuteo acequia o presa

166 JUAN FRANCISCO MAURA

Sobremdash A la muy alta y muy poderosa sentildeora Princesa dontildea Joana Gobernadora de los reinos de Espantildea etc ndash En su Consejo de Indias (Isabel de Guevara 619-21)

Iroacutenicamente la carta teniacutea que llegar a manos de la desdichada heredera del trono de Castilla e hija de los Reyes Catoacutelicos Juana laquola Locaraquo que habiacutea muerto el antildeo an-terior Son profeacuteticas las palabras de esta mujer no soacutelo porque sus hechos personales quedasen en el olvido sino porque incluso se ha borrado la historia de las mujeres en el Nuevo Mundo negando su presencia Por lo menos Isabel Guevara tuvo acceso a una pluma iquestCuaacutentas seriacutean las que ni siquiera sabriacutean escribir

Otra contemporaacutenea fue dontildea Leonor de Iciz que vivioacute durante la segunda mitad del siglo XVI Interesa sobre todo por los sonetos que escribioacute en elogio de Ercilla soldado que participoacute en la conquista de Chile y que se inmortalizoacute con su obra La Araucana (Serrano y Sanz 269 534) Lo mismo hizo Dontildea Bernarda Lintildeaacuten en 1610 autora de otro soneto en memoria del capitaacuten Gaspar Peacuterez de Villagraacute que participoacute en la conquista de Nuevo Meacutexico (Serrano y Sanz 270 14) Los escritos de estas mujeres tratan de de dos de las eacutepicas maacutes dramaacuteticas de la conquista

En el Peruacute y en pleno siglo XVII aparece otra fundadora de conventos Sor Bernardina de Jesuacutes que ademaacutes fue comparada con Santa Teresa por la semejanza de sus laquocartasraquo con las de la santa de Avila Fue fundadora del convento de Tacunga en Quito maacutes tarde destruiacutedo por un terremoto Dice Serrano y Sanz con respecto a su biografiacutea un tanto legendaria que fue carmelita descalza de Lima y hermana de Dontildea Mariacutea Benavides y Esquivel abuela de D Pedro de Peralta Barnuevo (Serrano y Sanz 269 553) Dicen que esta santa se alimentoacute durante treinta antildeos con laquochochos y caacutescaras de naranja hecho tan raro como increiacuteble Cuando fallecioacute reparaban las monjas en ponerle una vara de azucenas porque habiacutea sido casada y aquellas flores aparecieron milagrosamente sobre el cadaacuteverraquo (Serrano y Sanz 269 553)

Otra limentildea del primer cuarto del siglo XVII con reputacioacuten de santa fue Dontildea Luisa Melgarejo En este caso no se trata de una religiosa de oficio sino de la mujer del doctor Juan de Soto La uacutenica diferencia es que dontildea Luisa al parecer teniacutea laquovisiones y reve-lacionesraquo lo que debioacute poner nervioso a maacutes de un miembro del tribunal del laquoSanto Oficioraquo que consideraron sus escritos laquoculpadosraquo De su papel de laquosantaraquo pasa por lo tanto al de laquoposesaraquo o laquoendemoniadaraquo El inquisidor de Lima Gaitaacuten escribioacute un infor-me donde a traveacutes de la opinioacuten puacuteblica y de otras averiguaciones se deciacutea que dontildea Luisa Melgarejo laquomujer santaraquo sabiacutea cuando las almas de los difuntos saliacutean del Purga-torio El diacutea 14 de noviembre de 1623 se decidioacute tomar posesioacuten de todos los cuadernos en los que habiacutea escrito las experiencias de todos sus laquoarrobos suspensiones extasis y revelacionesraquo Estos cuadernos una vez recogidos presentaron toda una serie de al-teraciones borrones adiciones enmiendas incluso diferente letra por lo que despueacutes de haber sido examinados resultaron culpables145 Excelente imaginacioacuten debioacute tener dontildea Luisa Melgarejo la suficiente al parecer para convencer a algunos miembros de la iglesia de que en sus escritos laquohabiacutea algoraquo que mereciacutea la pena Estas cosas ocurriacutean en Lima uno de los centros culturales maacutes importantes de la vida social y poliacutetica en la Ameacuterica espantildeola Lima a comienzos del siglo XVII seguacuten el empadronamiento llevado

145 Serrano y Sanz 270 47 Veacutease J T Medina Historia del tribunal del Santo Oficio de la Inquisicioacuten de Lima (1569-1820) (Santiago Imprenta Gutemberg 1887) Tomo II 34-41

167ESPANtildeOLAS DE ULTRAMAR EN LA HISTORIA Y EN LA LITERATURA

a cabo en 1614 por el marqueacutes de Montesclaros era una ciudad de 25000 habitantes de los que 11000 eran espantildeoles El nuacutemero de religiosos y religiosas llegaba a 1720 (Pittaluga 77)

Se sabe que en la Isla de Santo Domingo durante el siglo XVI nacioacute o al menos resi-dioacute una poeta de ceacutelebre apellido en los aconteceres del Nuevo Mundo Dontildea Elvira de Mendoza de la que se conserva un manuscrito en la Real Academia de la Historia laquoCantares miacuteos que estaacuteis rebeladosraquo Eugenio de Salazar hace un elogio de ella como poeta en un Soneto a la ilustre Poeta y Sentildeora Dontildea Elvira de Mendoza moradora en la ciudad de Santo Domingo (Serrano y Sanz 270 53)

Nacida en Burgos sobre el antildeo 1590 dontildea Luisa de Padilla merece un lugar aparte dentro del grupo de mujeres escritoras de su eacutepoca Por su estilo faacutecil y castizo su no-vedad de pensamientos y su rica erudicioacuten recibioacute el siguiente comentario de Manuel Serrano y Sanz laquoPocas figuras hay en nuestra historia literaria femenil que puedan compararse a esta eminente prosista acaso la maacutes notable de cuantas florecieron en Es-pantildea durante el siglo XVIIraquo (Serrano y Sanz 270 95-96) Este comentario y comparacioacuten deberiacutea ampliarse para que tambieacuten incluyese a laquola historia literaria varonilraquo

Dontildea Luisa fue defensora de la labor que la Inquisicioacuten estaba realizando en la laquolim-piezaraquo de mujeres laquosoldados del demonioraquo que existieron en algunas provincias espa-ntildeolas en aquel tiempo Muchas de las mujeres que combinaban la magia con los po-deres curativos fueron condenadas no solamente por hombres de la Inquisicioacuten sino tambieacuten por mujeres de todas las clases sociales como es el caso de Luisa de Padilla condesa de Aranda En su obra Elogios de la verdad e invectiva contra la mentira preveniacutea contra aquellos que practicaban artes en contra de la religioacuten cristiana La magiacutea negra seguacuten Padilla era la causante de que muriesen casi tantas personas como otras causas naturales habieacutendose descubierto hasta seis mil brujas en Vizcaya y Guipuzcua con-fesando una mujer de un pueblo pequentildeo haber matado con su laquomagiaraquo a ochocientas personas (Perry 31) Eran estos laquomales de ojoraquo y maldiciones seguacuten la autora las causas de que se secasen los pechos de las madres lactantes que se separasen las parejas casa-das y que abortasen las embarazadas (Perry 31)

Si se tiene en cuenta que dontildea Luisa estuvo emparentada con la maacutes rancia aristocra-cia de su tiempo o lo que es lo mismo con algunos de aquellos que en cierta manera dirigiacutean los destinos de Espantildea en aquella eacutepoca (Duques de Lerma Duque de Uceda Marqueacutes de Cueacutellar Conde de Santa Gadea Marqueacutes de Belmonte por citar algunos) se comprenderaacute mejor su identificacioacuten con una institucioacuten que en teoriacutea velaba por la salvaguarda de los valores laquoeternosraquo de una Espantildea destinada a ser la campeona del ca-tolicismo durante los siglos XVI y XVII El padre de dontildea Luisa fue don Martiacuten de Padilla y Manrique extraordinario militar que proboacute su valor contra enemigos moriscos ingle-ses holandeses piratas berberiscos y el renegado genoveacutes Muley Faxad Fue veterano de la batalla de Lepanto donde apresoacute a cuatro galeras y acompantildeoacute con su escuadra a la reina Dontildea Margarita de Austria cuando vino de Geacutenova en 1598 laquoHabiacutea obtenido a 24 de julio de 1587 el tiacutetulo de Conde de Santa Gadea y en 1596 el de Capitaacuten General de la Armada del mar Oceacuteanoraquo (Serrano y Sanz 27095-96)

Por otra parte tambieacuten se sabe que dontildea Luisa participoacute directamente y desde tem-prana edad en la praacutectica de algunas actividades intelectuales como la historia y la arqueologiacutea a la vez que dedicaba su tiempo a virtudes cristianas como la caridad y el socorro de los necesitados (Serrano y Sanz 270 97) Resulta mucho maacutes faacutecil compren-

168 JUAN FRANCISCO MAURA

der la postura ideoloacutegica de esta gran mujer si tienen en cuenta ademaacutes de los factores antes mencionados otros tantos de caraacutecter biograacutefico concernientes a su educacioacuten y matrimonio

Otra escritora fue la mexicana dontildea Mariacutea Casilda Pozo natural de Temestla (Meacutexi-co) Nacida en el mes de abril de 1682 dejoacute escrita su biografiacutea en 16 cuadernos el ma-nuscrito original se encuentra en la biblioteca del colegio de San Gregorio de Meacutexico Fue su confesor el jesuiacuteta Domingo Quiroga que fue quieacuten la incitoacute a escribir su obra (Serrano y Sanz 270 137) Sor Juana de San Antonio aparece a principios del siglo XVII formando parte de un grupo de religiosas espantildeolas que fueron a Manila por la ruta de Meacutexico Ademaacutes de distinguirse por sus cualidades personales su obra interesa por ofrecer informacioacuten testimonial y costumbrista acerca de la forma de vestir de chinos y japoneses (Serrano y Sanz 270 225)

Otra monja esta vez ecuatoriana fue Gertrudis de San Ildefonso Nacida en 1652 profesoacute su vocacioacuten en el convento de Santa Cruz de Quito dejando escrita su vida por mandato de su confesor el padre Martiacuten de la Cruz el cual hizo una biografiacutea laquoen tres gruesos voluacutemenesraquo Gertrudis de San Ildefonso murioacute en 1709 (Serrano y Sanz 270 300) en olor de santidad

Sor Mariacutea Ana Agueda de San Ignacio nacioacute el 3 de marzo de 1695 en la dioacutecesis de la puebla de los Angeles en un rancho del lugar de Santiago Tecaliacute (Serrano y Sanz 270300) Esta monja mexicana escribioacute varias obras durante su vida conventual a lo largo de la cual desempentildeoacute el cargo de priora por muchos antildeos Entre sus obras todas de caraacutecter piacuteo y de laquoamor divinoraquo escribioacute un curioso y laquocopiosoraquo tratado de la Leche virginal de la Soberana Madre de Dios El padre Fr Juan de Villa Saacutenchez hace el siguiente comentario al respecto laquoen que hablando primero en sentido natural de los beneficios que debemos a Nuestra Sentildeora pasa a tratar en sentido miacutestico y alegoacuterico enten-diendo en la leche la doctrinaraquo (Serrano y Sanz 270301) Mexicana fue tambieacuten Sor Petronila de San Joseacute que ejercioacute como abadesa del Real monasterio de Jesuacutes Mariacutea de la ciudad de Meacutexico Escribioacute Vidas de varias religiosas ejemplares obra que tiene su im-portancia ya que al parecer laquoDe esta obra se sirvioacute D Carlos de Siguumlenza y Goacutengora para escribir su Parayso Occidental (Meacutexico 1684) seguacuten eacutel mismo declara en el proacutelogo diciendo lsquoa quien si hay algo bueno en esta historia se le debe todorsquoraquo (Serrano y Sanz 270 354) Menos conocida fue su compatriota Sor Luisa de Santa Catalina natural de Xacona laquopueblo situado en las inmediaciones de Zamora (Meacutexico)raquo siendo bautizada en 1682 Escribioacute Cartas espirituales a su confesor el P Juan Loacutepez de Aguado (Serrano y Sanz 270 361-62)146

Todos estos escritos la mayoriacutea de ellos ignorados por el gran puacuteblico tienen la im-portancia de darnos una perspectiva diferente En otras palabras ensentildearnos la maacutes refinada sensibilidad de muchas mujeres que permanecieron y en su mayoriacutea siguen permaneciendo a laquooscurasraquo de una eacutepoca tan rica de la literatura espantildeola como fue el Siglo de Oro Este siglo fue tambieacuten en su dimensioacuten literaria y artiacutestica patrimonio de la mujer

146 Para profundizar en muchas de estas escritoras hispano-americanas la consulta de la Biblioteca Hispano-Americana de Beristain de Souza resulta de capital importancia

169ESPANtildeOLAS DE ULTRAMAR EN LA HISTORIA Y EN LA LITERATURA

Sor Nada ardores divinos de una monja adolescente escritos ineacutedi-tos de una recieacuten profesa del siglo XVI147

iexclQueacute encantadores son tus amores hermana miacutea espo-sa iexclQueacute deliciosos son tus amores maacutes que el vino Y el aroma de tus perfumes es mejor que el de los baacutelsamos Miel virgen destilan tus labios esposa miel y leche hay en tu lengua y el perfume de tus vestidos es como aroma de incienso (Cantar de los Cantares 4 10-11)

Sor Nada llamada asiacute por humildad seguacuten dice el Indice de manuscritos de la Biblio-teca Nacional de Madrid es uno de los ejemplos maacutes desconocidos e interesantes que tenemos de la poesiacutea y prosa amoroso-religiosa del siglo XVII Hasta la fecha nunca se habiacutea publicado su obra e incluso hasta el antildeo 1995 para mi sorpresa no habiacutea copias microfilmadas de sus manuscritos en la Biblioteca Nacional Serrano y Sanz en su libro Apuntes para una Biblioteca de Escritoras Espantildeolas hace una escueta y pasajera mencioacuten de esta mujer y de su obra (68-69) siendo eso todo lo que hasta ahora se sabiacutea de ella Sus escritos consisten en los siguientes manuscritos

1 laquoEn queacute consiste un verdadero amor de Diosraquo 9 hojas uacutetiles en 4ordm letra del siglo XVII Biblioteca Nacional de Espantildea Manuscrito 1295926

2 laquoPintura del Propio Amorraquo laquoPintura del propio Amorraquo 10 hojas uacutetiles en 4ordm letra del siglo XVII Biblioteca Nacional de Espantildea Manuscrito 1295927

3 laquoEsplicacioacuten sobre en queacute consiste la paz del Almaraquo laquoQuartillas aacute un Alma que padece soledad interiorraquo 7 hojas uacutetiles en 4ordm letra del siglo XVII Biblioteca Nacio-nal de Espantildea Manuscrito 1295828

En cuanto a su persona soacutelo se nos dice que laquose encubrioacute con este seudoacutenimo laquoSor Nadaraquo Esta monja desconocida de origen hispanoamericano posee toda la frescura e ingenuidad de una joven apasionada metida por vocacioacuten u obligacioacuten a ejercer la profesioacuten maacutes comuacuten para mujeres de cierta clase social de su tiempo En sus liacuteneas podemos encontrar un misticismo simple incluso en algunos momentos infantil pero a su vez lleno de una fuerza y sensualidad interior poco comuacuten en escritos de este geacute-nero que desborda los liacutemites del laquoamor divinoraquo a traveacutes de los diaacutelogos entre el Alma y el Esposo Sor Nada consigue proyectar su amor a Dios maacutes allaacute de una experiencia romaacutentica Su experiencia es sincera y genuinamente miacutestica trascendiendo la imita-cioacuten o la propia creacioacuten poeacutetica ficcionalizada (Hatzfeld 30) Algunos pasajes son de un

147 Veacutease mi artiacuteculo Sor Nada ardores divinos de una monja adolescente escritos ineacuteditos de una monja profesa del siglo XVIIraquo Espeacuteculo Revista de estudios literarios 26 (2004) 1-10 Universidad Complutense de Madrid http wwwucmesinfoespeculonumero26sornadahtml

170 JUAN FRANCISCO MAURA

alto contenido eroacutetico con sustantivos y metaacuteforas que recuerdan la maacutes iacutentima unioacuten amorosa en unos casos y el tierno amor maternal en otros

[T]e miro Jesus mio desnudo a las inclemencias del tiempo y ardien-do en puro fuego de Amor por la salud de las Almas y me ensentildeas a que te ame con todo mi corason y puresa de espiritu No atendiendo ni buscando umanos intereses ni a solisitar consuelos ni regalos espi-rituales que suelen empantildear la puresa del noble corason No mi Jesus amable pues antes me ensentildeaste tu puro Amor que desnudo sean [sic] de encaminar mis passos desde el pesebre asta la cuna en donde te miro tan desnudo como el pesebre y todo Sentildeor por mi Amor (Mss 12959 26 hoja 1 v)

El manuscrito (12959 27) de la mencionada serie de tres contiene algunas correccio-nes quizaacute hechas por el confesor o quizaacute por ella misma cuando se dirige con excesiva familiaridad y arrebatado fervor a su Amado148 He escogido el manuscrito (12959 Caja 28) en primer lugar por ser el ejemplo maacutes representativo de su poesiacutea y prosa En este manuscrito encontramos de forma maacutes directa que alegoacuterica toda la frescura de un diaacutelogo entre Jesuacutes y el alma que raya como diriacutea Cervantes laquoa la llana y sin rodeosraquo (667 lib 2 cap 38) con el doloroso y a veces desesperado deseo de la entrega y la unioacuten final con el Amado La ortografiacutea no ha sido corregida respetaacutendose el texto ori-ginal149 Veamos el siguiente fragmento

Mira que te amo con Amor de padre y con Amor de esposo el mas fino y puro enamorado que no tan solo me presio de darte mi mano sino tambien todo mi cuerpo y sangre para que con mi pan de vida te sustentes y te regales a tus anchuras y que con mi propio espiritu vivas en paz como tu lo deseas y que mis amores sean unico alivio en tus trabajos en esta mortal vida pues si esto es asi y sabes que muero por darte vida dime esposa mia de que te fatigas Dame querida tus bras-sos y dime si me amas como yo te amo (Hoja 4)

148 La antologiacutea de Promis ha procurado insertar entre los textos antoloacutegicos algunos que se refieren a la es-critura de mujeres fundamentalmente de aquellos generados en el interior de los espacios conventuales Estos textos se fundan como laquohistorias de vidasraquo y responden casi siempre a los requerimientos de los confesores de las monjas coloniales En este sentido resulta valiosiacutesima la incorporacioacuten de la llamada Relacioacuten autobiograacute-fica de Sor Ursula Suaacuterez como una muestra significativa de la escritura monjil entendida en esta eacutepoca (como tambieacuten en la tradicioacuten europea medieval) inserta en las denominadas laquolabores de manoraquo de las religiosas ya que el texto escrito por mandato se convertiacutea en una suerte de entramado o tejido linguumliacutestico es decir en un nuevo bordado que la mayor parte de las veces el confesor convertido en censor iba haciendo tachando y enmendando En la antologiacutea Promis agrega un texto de Sor Tadea Garciacutea de la Huerta titulado Relacioacuten de la inundacioacuten que hizo el riacuteo Mapocho de la ciudad de Santiago de Chile en el monasterio de Carmelitas titular de San Rafael el diacutea 16 de junio de 1783 se trata de un poema tipo romance escrito en versos octosilaacutebicos y que da cuenta de lo sucedido ese diacutea en el convento (Resentildea de la literatura del reino de Chile de Joseacute Promis Eddie Morales Pintildea httpwwwupaclpublicaciones2002literatura_promishtm)

149 Son frecuentes las faltas ortograacuteficas Una de ellas es el uso constante del seseo La ausencia de acentua-cioacuten y puntuacioacuten exceptuando alguacuten punto o coma arbitrario no seguido casi nunca de mayuacutescula inicial lo mismo que el uso igualmente aribitrario de la h o de b v r q g j m n x etc No olvidemos de la misma forma la laxitud linguumliacutestica existente en el siglo XVII (no sabemos a queacute parte de eacuteste pertenece el manuscrito) asiacute como la joven edad de la monja

171ESPANtildeOLAS DE ULTRAMAR EN LA HISTORIA Y EN LA LITERATURA

Los versos del presente manuscrito poseen la misma fuerza que tiene su prosa Con una estructura estroacutefica indefinida estaacuten aparentemente corregidos por alguien que tu-vo la oportunidad de conocer personalmente a la autora Muy probablemente se trate del padre al que hace referencia al principio del primer manuscrito laquoMandame el Pd que le declare en que consiste un verdadero amor a Diosraquo a continuacioacuten continuacutea con su caracteriacutestica humildad laquo[O]bedesere y dire lo q Dios me inspire segun mi rudesa y simplisidadraquo (Mss 12959 26) En cuanto a la fuerza pasional de esta joven observamos con cierta tristeza coacutemo aparece sublimada en sus escritos con toda la enegiacutea de una joven mujer llena de intensidad y vida pero encerrada en los liacutemites de un convento Veamos un ejemplo en donde responde el Alma en los siguientes versos

O mi enamorado Jesus O mi dulse y tierno amanteO alegria de los sielos O dulse Jesus amable

(Toda Sentildeor me derrito toda Sentildeor me desagoy quiero vivir por ti ea sentildeor abrasadme) [Tachado en el original]

Toda Sentildeor me derrito toda Sentildeor me desagoy quiero morir por vos ea Sentildeor que ya acabo

Ya tus amores me llaman ya tus perfumes me traencon suspiros y agonias Sentildeor hasta que te alcanse

O mi Jesus amoroso no puedo mas dilatarmeya la pasiensia me falta dulse Jesus abrasadme

(No puedo vivir sin vos no puedo mas dilatarmeya la pasiensia me falta dulse) [Tachado en el original]

No puedo vivir sin vos mi dulse Jesus amablepues me teneis echisada siendo mi esposo y mi Padre

Ay que me abraso Ay que me quemo del Amor deJesus nasareno como no tocan y tantildeen a fuego150

Estos versos llenos de arrebato sublimado conectan con toda la tradicioacuten miacutestica es-pantildeola que se remonta a Ramoacuten Llul y que culmina en el maacutes universal de nuestros

150 En toda la fuerza y simbologiacutea del amor maacutes iacutentimo del maacutes alto y sublime placer de la unioacuten de los amantes tal como lo encontramos en el Cantar de los Cantares y en San Juan de la Cruz Leemos en la Biblia

Ya me he quitado la tuacutenica iquestCoacutemo volver a vestirme Ya me he lavado los pies iquestCoacutemo volver a ensuciarlosMi amado metioacute su mano por el agujero (de la llave) y mis entrantildeas se estremecieron por eacutel Me levanteacute para abrir a mi amado Mis manos destilaron mirra y mis dedos mirra exquisita en el pestillo de la cerradura (5 3-5)

Nos ocurre lo mismo con San Juan de la Cruz en su insuperable poema laquoLlama de amor vivaraquo

iexclOh cauterio suaveiexclOh regalada llagaiexclOh mano blanda iexclOh toque delicadoque a vida eterna sabey toda deuda pagaMatando muerte en vida la has trocado

172 JUAN FRANCISCO MAURA

miacutesticos San Juan de la Cruz Esta tradicioacuten se extiende hasta finales del siglo XVII esto es hasta los finales del Barroco siendo un poco maacutes tardiacuteo en la Ameacuterica espantildeola Sin tener como propoacutesito discutir en el presente trabajo a queacute corriente miacutestica pertenece la obra de Sor Nada es necesario resaltar no obstante el hecho de que estaacute escrito por una mujer y ademaacutes de tierna edad El manuscrito 12959 Caja 26 termina con estas pa-labras laquo[T]odas estas boverias escrivi por entretenimiento siendo resien profesa en la religion Sor Nadaraquo Mas no por la juventud de su autora los escritos dejan de tener lo-gradas metaacuteforas imaacutegenes y siacutembolos sacados de la naturaleza La alegoriacutea de la unioacuten matrimonial poseeacute el fuego liacuterico de la maacutes apasionada de las relaciones amorosas vivi-ficada por perfumes flores insectos animales escarchas nieves o abrojos Por lo tanto aunque la narracioacuten destile cierta ingenuidad no carece por ello de un vocabulario rico con el sabor popular de la poesiacutea de los cancioneros y romances de tradicioacuten renacen-tista No ha sido otra mi intencioacuten que la de rescatar del olvido unos escritos en prosa y en verso llenos de frescura y espontaneidad que nos muestran la pasioacuten con que la joven novicia se laquoentrega en cuerpo y almaraquo a los menesteres de su profesioacuten guiada por un padre espiritual en esos primeros antildeos de formacioacuten Esta ha sido la razoacuten por la que presento a continuacioacuten el citado manuscrito en su totalidad

Sor Nada (Mss 1295928)

laquoEsplicacion sobre en que consiste la paz del AlmaraquolaquoQuartillas a un Alma que padece soledad interiorraquo

[7 hojas utiles en 4ordm letra del siglo XVII]

+

Esplicacion sobre en que consiste la paz del Alma

Pareseme segun mi rudo entender que la verdadera paz del Alma con-siste en una muy pura y buena consiencia en un corason liso y bien intensionado en una verdadera rectitud de espiritu en el qual el Alma procura bolar a Dios sin jamas detenerse a respetos umanos ni reparar en que me diran ni de que me censuraran sino me apresuro a seguir a unos entenderes y pareseres dorados en los quales pretende el mundo engantildear y ensuciar si se puede la puresa de un corason unicamente de Dios y de su Santa ley y se lo conserva cristalino con la divina asis-tencia de la gracia y comprendido de su Amor y temor siguiendo la luz divina de tan amante Sentildeor Dios y ombre verdadero con que este ilustrado corason ni se altera ni se mueve por los disfrasses dorados que ase el mundo y sus moradores mayormente con falssas amistades aunque con ellos muestre buena intension Con la misma grasia y luz de Dios conose el buen corason estos disfrasses que le ase el mundo y se retira de todo con espiritu y valor esto sin la menor alterasion sino que en suma paz se retira a buscar a Dios dentro de su mismo corason

173ESPANtildeOLAS DE ULTRAMAR EN LA HISTORIA Y EN LA LITERATURA

y se abrasa con su pura verdad en la qual se le descubren mil interio-res secretos tan solidos puros y verdaderos que la misma Alma queda abismada y de puro grandes no los puede bien comprender ni esplicar pero estos mismos secretos divinos le sirven de espuelas para no solo correr sino bolar con pies de plumas en seguimiento de su bien ama-do Jesus y como este soberano Sentildeor es tan amante de sus espossas las Almas luego que la ve bolar con pies de plumas la sale al encuen-tro en despoblado campo que se deve de llamar Campo de Amor de Dios y el mismo Sentildeor se viene a las manos por ser Dios que nos ama con Amor infinito de Padre benigno y amoroso con que asiendose en contra deso este divino enamorado en lo interyor de el Alma que le busca con ansias de servirle y amarle y en aquella soledad traban una conversasion amorosa y sensilla como la pluma simple de quien esto escrive

Divino enquentroDios y el Alma en la soledad

O Soberano Principe de la paz dise el Alma tus perfumes me traen a ti bolando porque alla en el mundo y sus valedores me pretendian engantildear y entretenerme con pegaminossas amistades que facilmen-te me pudieran envenenar y matarme apartandome de ti Mi dulse Jesus amable mi Redentor Soberano que con tantas ansias me sales al enquentro como siervo [ciervo] erido de mis Amores los quales tu Amor me ofrese para que con tu mismo Amor te ame y te sirva en paz sin perturbarme ni contristarme ni cansarme de padeser pasando si se ofrese por escarchas nieves espinas ni abrojos ni por otros diverssos trabajos ni piedras de contradision que tu me puedes permitir pues por mas que el mar se levante con sus ferosses olas contra mi ni piedras se me tiren al rostro en todo Sentildeor me quieres con serenidad pasifica sin la menor perturbasion Todo Sentildeor quieres que lo tome con Serenidad de espiritu y asi vengo a ti bolando para que mejor me ensentildees a vivir segun las leyes de tu noble condision que me son muy agradables por mas que el mundo me las despresie por segir sus vanidades y torsidas intensiones con apariensias de bien y con este engantildeo y bien me quie-ro mas a mi que no a mi proximo veo que segun mi pareser se pierden muchas Almas y tambien de aquellos que se depresian y pasan por muy espirituales Con que me paresen pocos los que llegan a padeser con desnudes151 de espiritu por tu purisimo Amor y me parese essas se quedan muy atrasadas en la virtud por el peligro de bolver muy atras el paso de modo que se pueden despentildear y pereser en su misma desgra-sia ya por soberbia o por otras enfermedades que se les pega al corason y asi lo pasan como siegos ignorantes sin advertir en sus peligros

151 La letra en cursiva es miacutea

174 JUAN FRANCISCO MAURA

este aquerdo Sentildeor y otros que tu verdad me ensentildea me ase venir uyendo de las paredes del mundo y me vengo a ti Dios mio bolando con las dos Alas del Amor y temor que tu mismo Amor me ofrese tan de gracia y tan de grado que no se duentildeo mio con que lo responder a tan soberano beneficio y finesa de tus entrantildeas de Amorvengo Sentildeor y esposo mio unicamente a descansar en ti pues los peli-gros del camino me an puesto en mucho sobresalto temiendo el per-derte y sin ti perderme para siempre por una eternidad sin fin pues deseo amado mio ganarme ganandote a ti y vivir en ti aora en vida y despues eternamente y estos cuidados me traen fatigada molida y cansada y no podre tener alivio y descanso sino viendome entre tus brassos aunque sea estando en cruz pues ese es el fin de mis deseos vivir y morir en ti ablame mi cordero manso y ensentildeame a que ver-daderamente te ame como fiel esposa ea mi caro amigo dame la ma-no pues sabes Amor mio que en mi no ay mano sin tu misma mano y asi mi Dios y Sentildeor mi Principe Soberano con umilde rendimiento y deseos de alcansarte te suplico me des la mano y me consueles en estos mis trabajos Deseo Sentildeor vivir en paz y los malos amores de mi Naturaleza flaca no me dejan detentar y no quieren por mi desgrasia atropellar con las leyes de tu Amor ni quisiera perturbar mi corason quando me veo con un torvellino de olas y contratiempos que a menu-do me suelen sercar pero si tu Sentildeor me das la mano nada temo sino que me aseguro y vivire en paz sin que me fatiguen los contratiempos pues mi mano en la tuya y mi espiritu en el tuyo por mas borrascas que me envistan no seran bastantes para rendir mi voluntad a la suya bien si para pronunsiar un fiat que resuene bien atras en tus oidos y que en medio de mis fatigas me ponga a cantar tus divinas misericor-dias hea Sentildeor ya pretendo serrar mis labios por no desir mas bove-rias y deseo Sentildeor oir tus palabras de vida eterna abla Sentildeor que tu sierva oye con atension y cuydado mira mi Dios que se me ase tarde y espero con prisa deseando saborearme y aprovecharme de los ecos de tu Santa dotrina pues todas tus palabras saben a eterna vida callen pues mis sentidos y potensias y todo se ponga en paz pues mi dulse y soberano Sentildeor no se escusara de ablar me aun que en mudo silensio hea mi gran Prinsipe de la paz ablame que tus puros amores me traen perdida por estos asperos montes y mis cortos pasos no te pueden dar alcanse mirame mi Dios a tus pies postrada como un vil gusano y me-nor ormiga de la tierraabla Jesus y dise a su esposa el Alma querida esposa mia que me pides y por que te muestras tan fatigada y mal sufrida no vives como corde-rita del campo buscando de mis pechos el sustancial pasto mi Amor no te sustenta y mi grasia te promete eterna vida pues dime amada de que te fatigas y te muestras mal sufrida mira que te amo con Amor de padre y con Amor de esposo el mas fino y puro enamorado que no tan solo me presio de darte mi mano sino tambien todo mi cuerpo y

175ESPANtildeOLAS DE ULTRAMAR EN LA HISTORIA Y EN LA LITERATURA

sangre para que con mi pan de vida te sustentes y te regales a tus an-churas y que con mi propio espiritu vivas en paz como tu lo deseas y que mis amores sean unico alivio en tus trabajos en esta mortal vida pues si esto es asi y sabes que muero por darte vida dime esposa mia de que te fatigas Dame querida tus brassos y dime si me amas como yo te amoResponde el Alma152 Tu mi Dios sabes si yo te amo pues de mi solo se que mis deseos y ansias buelan a ti mas no alcanso a saber si te amo como tu de-seas ser amado y como desconfio tanto de mi y de mis prosederes falssos temo Dios mio perderme y perderte y asi Sentildeor pues no desechas mis Amores y te muestras tan fino en amarme te pido me ensentildees a vivir segun las leyes de tu pura verdad y fina condisionhija mia dise Dios la prueva de un verdadero Amor consiste en sufrir callar y padeser por mi unico Amor y en todo seguir mis pasos sin ja-mas retroseder por mas fragoso que se muestre el camino pues nunca seran tantas las espinas las escarchas ni las nieves ni los vientos bo-rrascosos que te se ofrescan pasar por mi Amor como los que mi tierno y desinteresado Amor paso por ti y siempre con mis pies descalssos y asi hija y esposa mia muestrate costante en seguir lo perfecto de mis passos pues mi braso fuerte sera en ti y peleara por ti y te sera el todo en tus nesesidades y mi Amor te convertira en dulse y suave lo amargo y molesto a la condision de la carrne

Responde el Alma

O mi enamorado Jesus O mi dulse y tierno amanteO alegria de los sielos O dulse Jesus amable

(Toda Sentildeor me derrito toda Sentildeor me desagoy quiero vivir por ti ea sentildeor abrasadme) [Tachado en el original]

Toda Sentildeor me derrito toda Sentildeor me desagoy quiero morir por vos ea Sentildeor que ya acabo

Ya tus amores me llaman ya tus perfumes me traencon suspiros y agonias Sentildeor asta que te alcanse

O mi Jesus amoroso no puedo mas dilatarmeya la pasiensia me falta dulse Jesus abrasadme

(No puedo vivir sin vos no puedo mas dilatarmeya la pasiensia me falta dulse) [Tachado en el original]

No puedo vivir sin vos mi dulse Jesus amablepues me teneis echisada siendo mi esposo y mi Padre

152 La aparicioacuten de una mayuacutescula al principio de una oracioacuten es algo totalmente arbitrario en este ma-nuscrito dada la libertad ortograacutefica de la autora Como se puede observar en la mayor parte de las veces no es el caso

176 JUAN FRANCISCO MAURA

Ay que me abraso Ay que me quemo del Amor deJesus nasareno como no tocan y tantildeen a fuego

Responde Jesus Hija mia tus simples vozes oygo y aunque resuenan bien a mis oidos pero te deseo mas mansa y pasifica en tus fervores ya sabes que no siempre as de vivir en mantillas ni a los pechos de tu Madre por que es rason que padescas con espiritu fuerte como mu-jer valerosa por que a una esposa del Rey soberano y prinsipe de la paz no le estan bien chiquerias ni fervores de nintildea malcriada y ya es ora que la destete su Madre la Naturaleza y que empesando su nueva vida camine con el favor de mi grasia sigiendo mis passos de eterna vida esto con sus pies descalssos segun mis leyes de Amor puro y desinteresado lo tienen ordenado153 y vivir en paz como lo deje en-cargado a mis apostoles Santos repitiendoles varias vezes Vivir en pas y caridad esto es un vivir en Dios y Dios en el Alma y asi hija mia el Alma que vive en paz vive en mi Como mis cortesanos en el cielo y pues me pides que te ensentildee a vivir segun las leyes de mi condision Repito el desir que te debes mostrar sufrida en todo tiempo y estado sin permitir en tu corason que ni aun los fervores se adelanten con estremos ni ademanes sino atiende y aprende de mi purisima Madre pues siempre la veras si bien lo consideras que mientras vivio en el mundo en todos sus trabajos se mostro firme fuerte costante como piedra diamante Pues mirandome nintildeo entre sus brasos desnudo en el pesebre desnudo y crusificado en los brassos de una cruz En estos y otros passos no se mudo su rostro sino que en suma serenidad y pasifico corason toda se sacrificaba enteramente en los brassos de mi Amor y rendido su corason y voluntad en la de mi eterno Padre por ejemplo te la doy y deseo que aprendas de sus nobles calidades pues te aseguro carisima que las leyes de mi condision y pura verdad todo lo allaras enserrado en el corason de mi purisima Madre sedle fiel y descansaras en paz

+

Quartillas a un alma que padese soledad interior

1Un Alma afligida y tristese ve en un campo desiertay en el su esposo la tieneAtormentada y sedienta

153 Es a traveacutes de estas liacuteneas lo que hace suponer que la autora de este diaacutelogo amoroso entre el Alma y Je-suacutes es novicia esto es laquoque estaacute empesando su nueva vidaraquo En las mismas liacuteneas una vez maacutes se hace alusioacuten al laquodesteteraquo de su vida civil laquoa una esposa del Rey soberano y principe de la paz no le estan bien chiquerias ni fervores de nintildea malcriada y ya es ora que la destete su Madre la naturalesaraquo (fol 5)

177ESPANtildeOLAS DE ULTRAMAR EN LA HISTORIA Y EN LA LITERATURA

2Pendiente se ve en el AyreSolo un hilo la sustentasin tocar el pie en el sueloporque del no tome tierra

3Mirandola esta yto a ytoaquel sol que la atraviesay la enviste con sus rayosmas ella no pestantildeea

4Como sigarra padese y como a tal se atormentabatiendo sus mismas Alasy el corason se atraviesa

5Con penas sustos temoresquando se mira assi mesmasin tener valor en nadaporque es la misma flaquesa

6Pero el Amor de su esposotoda su atension le llevay la pone en un abismopero cubierto en tiniebla

7Desea dar algun bueloy subir con ligeresapero se mira travadacon una fuerte cadena

8Clama suspira y padeseMas del todo se sujetaRindiendo su voluntadA la divina clemencia

9Los enemigos del AlmaCruelmente le asen guerray ella aunque firme y constantelos reselos la atormentan

178 JUAN FRANCISCO MAURA

10de todos modos padeseaunque gosa la asistensiadel divino esposo amadoque en su interior se recrea

11Solo de verla penary con verla tan serenadise resibe mil gustosde su sigarra pequentildea

12Le sabe el mundo a mil yelesy su trato le atormentaviendo en el mil falsedadesque todas saben a tierra

13Para poderse librardeja de correr y buelacon las Alas del Amory el mismo Amor se la lleva

Una vida dedicada a un amor divino un amor que le haraacute llenar un buen nuacutemero de cuartillas dedicadas a tan alta empresa Se desconoce si la vocacioacuten de Sor Nada con-tinuoacute con tanta intensidad el resto de sus diacuteas Ciertamente la vida en el covento no era faacutecil En algunos casos la experiencia era traumaacutetica incluso fatal para algunas de las adolescentes de la Ameacuterica Espantildeola Las reglas del claustro eran severas por varias razones Estas joacutevenes si no teniacutean el permiso de la superiora no podiacutean recibir visitas no podiacutean volver a sus casas su correspondencia era censuraba y no podiacutean salir del periacutemetro conventual Igualmente se levantaban antes del amanecer para oir misa tra-bajaban el resto del diacutea y lo maacutes interesante es que muchas veces esta vida era aceptada por muchas

Page 25: Tercera parte: Mujeres en la vida intelectual - …parnaseo.uv.es/Editorial/Maura/TerceraParte.pdf · La Biblia, por su parte, hace repetidas menciones de la mujer y sobre el comporta-

155ESPANtildeOLAS DE ULTRAMAR EN LA HISTORIA Y EN LA LITERATURA

La lista de disposiciones se hace interminable En los reinados de Fernando el Catoacute-lico Carlos V Felipe II Felipe III o incluso Carlos II la insistencia es constante La ra-zoacuten de esta insistencia seriacutea bastante obvia dado que con un oceacuteano por medio seriacutean muchos los que se aprovechasen de llevar una doble vida marital sin el estricto control y vigilancia de sus mujeres que se encontraban en la peniacutensula La ley XXVII libro IX tiacutetulo XXVI determina laquoDeclaramos por personas prohibidas para embarcarse y pasar a las Indias todos los casados y desposados en estos reinos lsquosino llevaren con ellos sus mujeresrsquo aunque sean virreyes oidores gobernadores o nos fuesen a servir en cual-quier cargo y oficios de Guerra Justicia y Hacienda porque es nuestra voluntad que todos los susodichos lleven a sus mujeresraquo (Villafantildee 127) laquoLos eclesiaacutesticos eran los en-cargados de dar cuenta a los tribunales competentes de aquellos que estando casados permaneciacutean en Indias sin sus mujeres Son reiteradas las disposiciones de Fernando el Catoacutelico en este sentidoraquo138 En 1514 el rey don Fernando ordena en una provisioacuten para la isla Espantildeola laquodoy licencia eacute facultad aacute cualquier persona naturales de estos Reynos para libremente se puedan casar con mujeres naturales de esa dicha ysla sin tener que incurrir por ello en pena algunaraquo (Villafantildee 129)

No se debe olvidar tampoco a aquellas mujeres que decidieron pasar a las laquonuevas tierrasraquo solteras Estas mujeres tambieacuten tuvieron un papel importante en el desarrollo de las nuevas colonias Los organismos espantildeoles del momento como los mandatarios indianos y todos los cronistas no dejaron pasar desapercibida la importancia social de estas mujeres en la poliacutetica de poblamiento laquo[E]s cierto que los pueblos de Indias nuevamente poblados no se tienen por fijos o estables ni permanentes hasta tanto que mujeres espantildeolas entren en ellos y los encomenderos y conquistadores se casen por muchas causas y respetos buenos y saludables que para ello hayraquo (Villafantildee 126-27)

Si la intencioacuten era la de una presencia permanente en las tierras americanas la mujer soltera que pasase a ellas siempre seriacutea un motivo maacutes para el colono o conquistador de continuar en el mismo suelo Se podriacutea empezar una familia si asiacute se quisiese sin tener que pensar en volver a la metroacutepoli ya fuese a disfrutar de los bienes adquiridos o a laquobuscarraquo una esposa El problema aparecioacute cuando se produjo un exceso de mujeres solteras lo que de alguna manera alteroacute la estructura social existente ya que no habiacutea muchas opciones para ellas aparte del matrimonio o el convento

En consideracioacuten a que la experiencia habiacutea demostrado que un exce-sivo nuacutemero de mujeres ejerciacutea perniciosa influencia sobre la moral y las costumbres se suplicaba al rey no otorgase a aquellas tantas auto-rizaciones para emigrar al Peruacute La ciudad de la Plata fundada en 1538 emite en 1577 un informe en el que se expone la urgente necesidad de que se funde un convento de monjas pues en el territorio de las Au-diencias de Los Charcas existiacutea un gran nuacutemero de muchachas que no pudieacutendose casar se hallaban en gran peligro de perderse (Konetzke laquoemigracioacutenraquo 149)

138 Solorzano Pereira Juan de Libro Primero de la Recopilacioacuten de las Ceacutedulas Reales Cartas y Provisiones y Or-denanzas Reales Noticia preliminar de Ricardo Levenne Universidad de Buenos Aires Facultad de Derecho Y Ciencias Sociales Pub del Instituto de Historia del Derecho Argentino Coleccioacuten de Textos y Documentos para la Historia del Derecho Argentino t V Buenos Aires Imp de la Universidad de Buenos Aires 1945 (Li-bro I Ley 10 laquoQue los Espantildeoles puedan casar con Indias y al contrario a su voluntadraquo t2 p 138 citado en Villafantildee 129

156 JUAN FRANCISCO MAURA

Entristece ver coacutemo se manejan las cifras de estas mujeres como si de ganado o de bienes suntuarios se tratase Por otra parte existieron irregularidades como la de pobla-doras espantildeolas que vivieron amancebadas con hombres que ya estaban casados en la peniacutensula Normalmente esto ocurriacutea cuando la estancia del conquistador se prolonga-ba maacutes de lo debido en lugares donde habiacutea pocas espantildeolas Muchas veces nacieron hijos de estas uniones que hicieron auacuten maacutes difiacutecil la situacioacuten para las mujeres que esperaban en Espantildea a un marido que ya no teniacutea ningunas intenciones de volver En los juicios de residencia los documentos acostumbran a citar estos casos ya que era parte de su obligacioacuten castigar las irregularidades extramatrimoniales y salvaguardar las buenas costumbres familiares que con tanto intereacutes se deseaba mantener laquoUn ejemplo nos lo da la isla de Cuba donde en 1532 viven con hombres casados Olalla Hernaacuten-dez Santillana Aranda lsquola Cordobesarsquo Catalina de Leoacuten Catalina Saacutenchez Francisca Hernaacutendez Mayor de Azebedo Juana de Valeros y lsquouna mujer que estaba en casa de Ayalarsquoraquo (Borges 416)

Estos casos no fueron aislados y mucho menos en Cuba centro neuraacutelgico de todo el movimiento de ida y vuelta entre la metroacutepoli y el Nuevo Mundo Estas ocho acusa-ciones por lo tanto no tienen porqueacute considerarse extraordinarias y menos en el lugar maacutes cosmopolita de las Indias en esos momentos al que llegaban flotas a cada momen-to Al parecer existieron casos parecidos en el Riacuteo de la Plata Peruacute y Nueva Espantildea (Ratcliffe 347) El margen legal para que estas mujeres viviesen como quisiesen estuvo limitado por una moral que veiacutea uacutenicamente en el matrimonio o el convento una salida laquovaacutelidaraquo para que fueran aceptadas socialmente Los hombres en iguales circunstan-cias fueron juzgados por una laquomoralraquo mucho maacutes permisiva

La mujer y el cuerpo eclesiaacutestico

Pues iquestquieacuten diablos os traiacutedo aquiacute dijo don Quijote siendo hombre de la iglesia iquestQuieacuten sentildeor replicoacute el caiacutedo laquomi desventuraraquo Pues otra mayor os amenaza dijo don Quijote sino me satisfaceacuteis a todo cuanto primero os pregunteacute (Cervantes Don Quijote )

Otro factor a tener en cuenta en un anaacutelisis sobre la presencia de la mujer en el Nuevo Mundo es el que tiene que ver con la institucioacuten maacutes importante de las que llegaron desde Europa la iglesia catoacutelica Sin aacutenimo de criticar a tan compleja institucioacuten res-ponsable de gran parte de los aconteceres en el Nuevo Mundo vale la pena analizar algunas singularidades Muchos de sus miembros fueron grandes ejemplos de valor e inteligencia a la hora de tratar los maacutes variados y escabrosos asuntos con los que se encontraron los cristianos en la otra orilla durante este periacuteodo Se debe resaltar tam-

157ESPANtildeOLAS DE ULTRAMAR EN LA HISTORIA Y EN LA LITERATURA

bieacuten su caraacutecter medieval en la manera de hacer apostolado y de entender y tratar a los potenciales cristianos Si se tienen en cuenta los privilegios y prerrogativas que algunas de las altas jerarquiacuteas eclesiaacutesticas tuvieron no seriacutea superfluo estimar que un respeta-ble porcentaje de la poblacioacuten de origen laquodudosoraquo muy bien podiacutea venir de la misma iglesia Fueron muchas las viacutectimas y muchas las familias divididas por un padre laquoinvi-sibleraquo Gran parte de los hijos o laquosobrinosraquo de estos sacerdotes pasaron a ocupar cargos similares incluyendo los privilegios que estos cargos llevaban consigo como si se trata-se de cualquier otro oficio gremial transmitido generacionalmente regla tan comuacuten en la Europa medieval Todaviacutea a finales del siglo XIII en Espantildea los derechos de los hijos y nietos de los sacerdotes estaban protegidos por la ley sin que hubiesen podido ser erradicados por las reformas gregorianas (Ratcliffe 347)139

Las letras espantildeolas ya se haciacutean eco de estos lances amorosos entre representantes de la Iglesia y ciertas damas del lugar desde los tiempos del poeta riojano Gonzalo de Berceo En su obra maacutes conocida Los milagros de Nuestra Sentildeora Berceo describe con un realismo ingenuo y sencillo relatos de humor y de humanismo sobre aquellos hombres de carne y hueso que eran perdonados por la intercesioacuten de la Virgen Mariacutea Juan Ruiz por su lado haraacute de su Libro de buen amor la obra maacutes representativa en este sentido Seriacutea prolijo recordar la actuacioacuten de la Iglesia durante diversos periacuteodos de la Edad Media no soacutelo en Espantildea sino en toda Europa En la Espantildea musulmana del siglo XII concretamente en Sevilla el comportamiento de los representantes de la iglesia cristia-na (mozaacuterabe) en territorio islaacutemico es duramente criticado por el sevillano Ibn Abdun Este precioso documento muestra el estricto control y falta de confianza que existiacutea sobre la mujer prohibieacutendolas que entrasen en las laquoabominablesraquo iglesias cristianas

porque los cleacuterigos [cristianos] son libertinos fornicadores y sodomi-tas Asimismo debe prohibirse a las mujeres francas que entren en la iglesia maacutes que en diacuteas de funcioacuten o fiesta porque alliacute comen beben y fornican con los cleacuterigos y no hay uno de ellos que no tenga dos o maacutes de estas mujeres con que acostarse Han tomado esta costumbre por haber declarado iliacutecito lo liacutecito y viceversa Convendriacutea pues mandar a los cleacuterigos que se casasen como ocurre en Oriente y que si quie-ren lo hagan (Leacutevi-Provenccedilal 150)

Pese a existir una convivencia paciacutefica durante gran parte de la Edad Media entre los tres credos monoteiacutestas de Espantildea (cristianos musulmanes y judiacuteos) esto no suponiacutea que no existiese desprecio y desconfianza entre estos grupos religiosos Dice Abdun resaltando el peligro que suponiacutea que una mujer entrase en casa de un cleacuterigo cristiano de vida ceacutelibe

No debe tolerarse que haya mujer sea vieja o no en casa de un cleacuterigo mientras eacuteste rehuacutese casarse Obliacutegueseles ademaacutes a circuncidarse co-mo les obligoacute al-Mutadid pues si a lo que dicen siguen el ejemplo de Jesuacutes (iexclDios les bendiga y salve) Jesuacutes se circuncidoacute y precisamente ellos que han abandonado esta praacutectica tienen una fiesta que celebran solemnemente el diacutea de su circuncisioacuten (Leacutevi-Provenccedilal 150-151)

139 Valdriacutea la pena ver si han cambiado mucho las cosas desde hace quinientos antildeos a esta parte o si in-cluso la iglesia moderna ha retrocedido en tolerancia en cuanto a las relaciones sexuales de los representantes de la Iglesia

158 JUAN FRANCISCO MAURA

El historiador argentino Germaacuten Arciniegas recoge un pasaje ilustrativo de lo men-cionado anteriormente pero trasladado al ambiente de la colonia diciendo que incluso en poblaciones pequentildeas como Santa Fe con poco maacutes de un convento y una ermita la fragilidad de la carne enredaba a frailes soldados y virreyes por igual laquoEl buen So-liacutes que murioacute en olor de santidad con la cabeza reclinada sobre un par de ladrillos y en saya de franciscano cruzaba en las noches el solar de su palacio para ir a besar a la Marichuelaraquo (118-19)

Arciniegas recoge tambieacuten un suceso aparecido en el diario de Lima en 1667 que no tuvo que ser extraordinario durante los primeros antildeos de la colonia laquoEl fraile carmelita mdashGrande hereje y siendo sacerdote deciacutea misa gran perro lujurioso deshonesto que relatando sus maldades dijo que en cierta ciudad habiacutea conocido carnalmente a maacutes de trescientas y sesenta mujeres y en un convento de monjas habiacutea cometido muchos sacrilegios Este lo trujeron preso de Buenos Aires por Chileraquo (119)

Las controversias de la iglesia moderna sobre las relaciones que los eclesiaacutesticos de-ben tener con el sexo femenino parece que no han encontrado todaviacutea respuesta Sigue existiendo miedo y recelo a que la mujer comparta no soacutelo poder en la jerarquiacutea de la iglesiacutea sino en la vida privada de los miembros de la institucioacuten En la Nueva Espantildea el primer obispo de Meacutexico Juan de Zumaacuterraga viendo en la mujer un ser de tentacioacuten irresistible prohibioacute terminantemente la presencia de eacutestas en su casa Ni siquiera para su limpieza y aseo El franciscano Juan de Torquemada se refiere a este comportamien-to como una de las virtudes del popular obispo

Fue este benditiacutesimo prelado muy amigo de la virtud y de virtuosos y aceacuterrimo reprehendedor de vicios y viciosos y tan enemigo de la ociosidad que no permitiriacutea que alguno de su casa estuviese ocioso fue amiciacutesimo de la limpieza por lo cual jamaacutes consintioacute que mujer alguna entrase en su casa aunque fuese necesaria al servicio de ella ni nunca consintioacute que por alguna ocasioacuten subiese mujer a lo alto y aposentos de ella antes lo teniacutea todo cerrado como un monasterio porque sabiacutea (como quien tambieacuten sabiacutea) que la ocasioacuten suele derribar los maacutes fuertes y robustos corazones (450 lib 20 cap 31)

No fueron uacutenicamente miembros de la iglesia catoacutelica los que valoraron la lucha con-tra la tentacioacuten siguiendo al pie de la letra el crudeliacutesimo refraacuten laquoentre santa y santo pared de cal y cantoraquo Se tienen algunas noticias de la vida social de los primeros tiem-pos de la colonia En estos documentos se puede observar coacutemo no distaban mucho las oacuterdenes que se dictaban en la metroacutepoli y las que se llevaban a cabo en la Nueva Espantildea La vida social tanto de damas como de algunos miembros de la iglesia de las colonias era maacutes laquorelajadaraquo de lo que las normas permitiacutean Gracias a la informacioacuten ofrecida por Manuel Romero de Terreros disponemos de los nombres de las primeras virreinas

Las esposas de los primeros cinco Virreyes Don Antonio de Mendoza Don Luis de Velasco Don Gastoacuten de Peralta Don Martiacuten Enriacutequez de Almanza y Don Lorenzo Suaacuterez de Mendoza Conde de la Coruntildea fueron respectivamente Dontildea Caterina de Vargas Dontildea Ana de Cas-tilla y Mendoza hija de Don Diego de Castilla Sentildeor de Gor y Caba-

159ESPANtildeOLAS DE ULTRAMAR EN LA HISTORIA Y EN LA LITERATURA

llerizo de Carlos V Dontildea Leonor de Vieo Dontildea Mariacutea Manrique hija del Marqueacutes de Aguilar y Dontildea Catalina de la Cerda hija del segundo Duque de Medinaceli (Romero 2)

Existen noticias concretas de la seacuteptima virreina de la Nueva Espantildea (1586) dontildea Blanca de Velasco marquesa de Villamanrique En ellas destaca lo anteriormente men-cionado sobre la falta de tolerancia existente en aquellos tiempos difiacutecilmente com-prensible si no fuera por fragmentos esporaacutedicos conservados sobre la vida colonial en la Nueva Espantildea En la siguiente Relacioacuten hecha por autores anoacutenimos sobre la visita que hizo Fray Alonso Ponce Comisario General de la Orden Seraacutefica a las provincias de la Nueva Espantildea se mencionan las eneacutergicas medidas que con los miembros de su orden en su opinioacuten de moral laquomuy relajadaraquo tomoacute este religioso Tambieacuten aparecen mencionadas sus relaciones con la Virreina

Captoacutese ademaacutes la enemistad del gobernante y de la Virreina Dontildea Blanca de Velasco hija del cuarto Conde de Nieva sentildeora seguacuten pare-ce de conducta ligera y caraacutecter maacutes que dominante laquoPor este mismo tiempo (septiembre de 1586) fueron el Virey y la Vireyna a holgarse y recrearse en la cibdad de Xochimilco Posoacute con toda su casa dentro de nuestro convento en un dormitorio deacutel y detuacutevose alliacute siete u ocho diacuteas en que los indios les hicieron grandes fiestas aunque les costaron caras porque en una dellas murieron dos o tres dellos con un tiro que se disparoacute y reventoacute y al principal indio de aquella cibdad hirieron muy malraquo (Romero 3-4)

A pesar del riacutegido control eclesiaacutestico y civil que habiacutea en la Nueva Espantildea existieron tambieacuten pareacutentesis en los que incluso miembros de la iglesia y mujeres mdashhumanos al fin y al cabomdash pudieron disfrutar de algunos momentos de regocijo y alegriacutea Con-tinuando con la cita anterior el mismo autor se queja del laquoexcesoraquo de libertad en los frailes que se suponiacutea que teniacutean que profesar una extremada pobreza y no digamos castidad En primer lugar se describen pormenorizadamente la abundancia en el tipo y cantidad de comida de toda clase dulces y vino que se consumieron con largueza y generosidad durante aquellas fiestas Pero lo que maacutes indigna al autor (o autores) fue que llegasen a entrar mujeres en el convento

y aunque todo esto es malo delante de Dios y delante de los hom-bres lo que maacutes mal parecioacute y de que todo el mundo tuvo que mur-murar fueacute la demasiada libertad rotura y disolucioacuten que hubo en en-trar y estar muy de propoacutesito mujeres no soacutelo la Vireyna y las suyas sino otras muchas dentro del dicho convento y andar por las celdas como si fuese cosa profana y como si no hubiera breve apostoacutelico que soacute graves penas y censuras prohibe estas entradas y como si a los frai-les no los comprendiera el dicho breve por admitirlas y no estuviera asiacute declarado y mandado por nuestros estatutos generales de Toledo (Romero 4-5)

La preocupacioacuten por las laquotentaciones de la carneraquo fuera del matrimonio siempre es-tuvo en la mente de los religiosos espantildeoles asiacute como de otras nacionalidades y reli-

160 JUAN FRANCISCO MAURA

giones que intentaban vanamente erradicar algo tan intriacutenseco al ser humano como a cualquier otra especie animal Esta preocupacioacuten se acentuoacute mucho maacutes en el Nuevo Mundo donde muchas sociedades tribales no veiacutean a la mujer como parte integrante de su propiedad privada La razoacuten es obviamente socioloacutegica y ha existido desde el principio de los tiempos en las civilizaciones maacutes primitivas laquoNo desearaacutes a la mujer del proacutejimoraquo El quebrantar este precepto equivaldriacutea a desestabilizar desde su base a la sociedad judeo-cristiana fundamentada en la familia Las penas aplicadas en estas transgresiones seraacuten lo suficientemente severas como para marginar socialmente mdashen el mejor de los casosmdash a aquellos que las pongan en praacutectica Siendo la mujer la encar-gada por la naturaleza de trasmitir la descendencia de la especie su libertad sexual se veraacute limitada por el peligro de quedar embarazada cada vez que ignore tal elemental precepto140

Primeras escritoras del Nuevo Mundo

Contra cuerdos y contra locos estaacute obligado cualquier caballero andante a volver por la honra de las mujeres cualesquiera que sean Cuanto maacutes por las reinas de tan alta guisa y pro como fue la reina Madaacutesima a quien yo tengo particular aficioacuten por sus buenas partes porque fuera de haber sido fermosa ademaacutes fue muy prudente y muy sufrida en sus calamidades que las tuvo muchas (Cervantes Don Quijote)

Fueron varias las escritoras que durante los siglos XVI y XVII tuvieron una relacioacuten di-recta o indirecta con el Nuevo Mundo Muchas de ellas eligieron la vida monaacutestica mdashen algunos casos como refugio huyendo de sus maridosmdash uacutenica salida en una estructura social en donde no eran muchas las opciones especialmente en una eacutepoca donde el fac-tor religioso pesaba casi tanto como el econoacutemico pero sobre todo para dedicarse a una vida espiritual difiacutecilmente alcanzable en otras circunstancias Mariloacute Vigil apunta que las monjas que lo eran por su propia voluntad ademaacutes de tener inquietudes religiosas tambieacuten las teniacutean intelectuales como es el caso de la escritora miacutestica espantildeola Santa Teresa de Jesuacutes (1515-1582) que ademaacutes de tener una de las vidas maacutes interesantes que se conozcan supo sacar tiempo para escribir las maacutes bellas manifestaciones de la poesiacutea liacuterica y sobre todo de la prosa castellana (Vigil 237-38) Cada una de estas mujeres de-dicadas a la vida literaria y espiritual de su tiempo se merece muchiacutesimo maacutes espacio del que se les pueda ofrecer en estas pocas liacuteneas No obstante con estas pasajeras men-

140 Aunque afortunadamente las cosas han cambiado para la mujer no se debe dejar de mencionar la can-tidad de abusos sexuales de la que es viacutectima en la sociedad moderna

161ESPANtildeOLAS DE ULTRAMAR EN LA HISTORIA Y EN LA LITERATURA

ciones se espera al menos incluirlas y poder despertar el suficiente intereacutes para que sus vidas y sus obras no sigan sumergidas en las simas del olvido Para que estas mujeres de la iglesia pudiesen satisfacer su curiosidad cognoscitiva era necesario romper todas aquellas barreras que supusiesen un estorbo o una restriccioacuten a la hora de investigar consultar o hablar con cualquier persona religiosa de cualquier orden o secular ya fue-se obispo o cleacuterigo Las posiciones intelectuales entre las diferentes oacuterdenes religiosas fueron muy dispares como bien es sabido No eran iguales los planteamientos teoloacute-gicos de los dominicos que los de los franciscanos o los de los carmelitas que los de los agustinos o jesuitas Era necesario por lo tanto tener acceso a estas fuentes de informa-cioacuten para poder constrastar las diferencias y hacer valoraciones propias (Vigil 237-38) El escritor espantildeol Caro Baroja destaca el caraacutecter enciclopeacutedico del catolicismo donde se han integrado corrientes y posturas muy dispares que a traveacutes del diaacutelogo daban cierto espacio al creyente con maacutes curiosidad intelectual para que este pudiese compa-rar y valorar las diferentes opciones que se le ofreciacutean (Vigil 237-38)

Varias de estas mujeres intelectuales fueron hijas de conquistadores que aunque na-cidas en suelo americano seguiacutean expresaacutendose en la lengua de sus padres con no me-nos fuerza que sus contemporaacuteneas peninsulares Es cierto que existieron numerosas escritoras en el Nuevo Mundo durante el siglo XVIII algunas dedicadas incluso al estudio de las matemaacuteticas como la mexicana Dontildea Francisca Gonzaga y Castillo Pero para limitar el presente trabajo a los siglos XVI y XVII uacutenicamente se incluiraacuten ejemplos de estos dos siglos

La peruana Josefa de Alarcoacuten publicoacute en 1648 unas liras dedicadas a las Exequias del Priacutencipe Baltasar Carlos

Cifro en capilla breveEl tribunal de la Magestad maacutes graveEn fe de lo que debeA Carlos que en dos mundos no cabe141

El caso de Sor Jeroacutenima de la Asuncioacuten es muy interesante una mujer que tuvo la oportunidad de viajar a Meacutexico y posteriormente a las Filipinas para cumplir con las mi-siones que le habiacutean sido encomendadas por su orden Nacida en Toledo en 1555 en el seno de una noble y acaudalada familia estuvo destinada a recorrer el mundo ofrecien-do sus servicios a todos los necesitados distinguieacutendose por su ardiente caridad laquovien-do que los galeotes eran tratados con dureza excesiva sobre todo cuando los llevaban de un pueblo a otro procuroacute aliviar las penas de aquellos desgraciados y lo consiguioacute en parteraquo (Serrano y Sanz 268 65) Hija del licenciado e ilustre jurista Pedro Garciacutea Yaacute-ntildeez y de dontildea Catalina de la Fuente ingresoacute contra su voluntad en el monasterio de las Clarisas de Santa Isabel de los Reyes (Toledo) el 5 de agosto de 1570 (Trevintildeo 46) hay que decir que eacutesta no seraacute la uacutenica voluntad contra la que tuvo que luchar

Sor Jeroacutenima se embarcoacute para Meacutexico y de alliacute partioacute hacia Manila junto con siete compantildeeras en el famoso laquoGaleoacuten de Manilaraquo que saliacutea anualmente del puerto mexi-cano de Acapulco Su viaje a las Filipinas duroacute un antildeo y tres meses desde su salida de Espantildea tiempo en el que demostroacute un gran valor y determinacioacuten por el soacutelo hecho de

141 Manuel Serrano y Sanz Apuntes para una biblioteca de escritoras espantildeolas desde el antildeo 1401 al 1833 vols 268 269 270 271 Biblioteca de Autores Espantildeoles (Madrid Atlas 1975) 268 19

162 JUAN FRANCISCO MAURA

embarcarse en tan precarias naves Fue la primera misionera de Oceaniacutea muriendo en Manila en 1621 Alliacute fundoacute el monasterio de Santa Clara que perviviriacutea hasta ser bom-bardeado en la Segunda Guerra Mundial (Trevintildeo 47) Escribioacute su Vida donde trata de la fundacioacuten del convento y de todas las tribulaciones mdashllegoacute a ser excomulgadamdash y satisfacciones que una vida dedicada a una causa justa proporciona Tambieacuten escribioacute una obra de caraacutecter filosoacutefico-teoloacutegico titulada Carta de marear en el mar del mundo nombre alegoacuterico que da cuenta de la enorme distancia recorrida a traveacutes del laquomar del espiacuterituraquo por sor Jeroacutenima He aquiacute algunos de sus versos de caraacutecter religioso

Vuestra soy para vos naciacuteiquestQueacute mandaacuteis hacer de miacute Inaccesible grandezaEterna Sabiduriacuteay bondad del alma miacuteaDios un ser poder y Altezamirad la suma pobrezade eacutesta que se ofrece aquiacuteiquestQueacute mandaacuteis hacer de miacute (Serrano y Sanz 268 66)

Ya en Meacutexico tenemos otro ejemplo de una mujer dedicada por completo a Dios y al estudio y composicioacuten de obras de caraacutecter teoloacutegico Dontildea Ana Mariacutea del Costa-do de Cristo nacida en la ciudad de Tlaxcala hacia el antildeo 1650 Tomoacute la orden de San Francisco para consagrarse a las labores de su orden y a la escritura Se dice que con los escritos de Dontildea Ana Mariacutea se podriacutean formar veinte tomos (Serrano y Sanz 268 282) Estas son algunas de sus obras Vida y muerte de Jesucristo Nuestro Sentildeor Vida del Seraacutefico Padre San Francisco de Asiacutes Vida de la iacutenclita Virgen Santa Clara Vida del sutiliacutesimo doctor Juan Duns Escoto

Pero no todas las monjas tuvieron vidas tan dedicadas al estudio y la oracioacuten Loacutegica-mente entre un nuacutemero tan grande de mujeres existioacute de todo y seriacutea un error pensar que todos los conventos femeninos estaban integrados por laquocaacutendidas palomasraquo Una monja en el siglo XVI y XVII teniacutea mucha maacutes fuerza que una mujer ordinaria ya que actuaban en grupo y la entrada a los recintos donde viviacutean estaba permitida solo a mu-jeres Esta situacioacuten las haciacutea mucho maacutes fuertes a todos los niveles que una mujer sola protegida uacutenicamente por su familia laquoLas monjas durante los siglos XVI y XVII lucharon por eludir la clausura y por zafarse del control que los frailes de las secciones masculi-nas de sus congregaciones ejerciacutean sobre ellasraquo (Vigil 230) Soacutelo un antildeo maacutes tarde que dontildea Ana Mariacutea del Costado de Cristo en 1651 y a 12 leguas de Meacutexico nacioacute la sin par Sor Juana Ineacutes de la Cruz hija de don Pedro Manuel de Asbaje natural de Vergara (Vizcaya) y de Dontildea Isabel Ramiacuterez de Santillana hija de espantildeoles (Serrano y Sanz 268 289) Por ser sin lugar a dudas la poeta maacutes importante de su tiempo y probable-mente la maacutes conocida del mundo hispano no profundizaremos en ella Su obra es un canto a la inteligencia y el exponente maacutes destacado de la literatura barroca americana tanto en prosa como en verso Destacareacute simplemente que Sor Juana Ineacutes pese a vivir en un sociedad donde no eran excesivas las libertades concedidas a las mujeres tuvo el caraacutecter y la determinacioacuten de dejarnos las maacutes bellas poesiacuteas amorosas que si bien estuvieron enmarcadas en un ambiente religioso como era de esperar por su condicioacuten

163ESPANtildeOLAS DE ULTRAMAR EN LA HISTORIA Y EN LA LITERATURA

pudieron transcender como unas de las maacutes bellas manifestaciones literarias que hoy en diacutea se conservan Fue su agudeza mental sensibilidad y cultura tal que no fueron suficientes los soacutelidos muros del convento para contener el genio de tan extraordinaria mujer Recordemos sus conocidiacutesimos versos en defensa de las mujeres

Hombres necios que acusaacuteisa la mujer sin razoacutensin ver que sois la ocasioacutende lo mismo que culpaacuteis142

Las metaacuteforas y la delicadeza que emplea en rebatir a su obispo en su laquoRespuesta a sor Filotea de la Cruzraquo no son solamente el epiacutetome del feminismo de su tiempo sino una de las maacutes brillantes manifestaciones del barroco hispano Poesiacutea teatro ensayo y un conocimiento extraordinario de las ciencias claacutesicas de su tiempo hacen de esta mujer un ejemplo extraordinario de las letras universales Ya son cientos los artiacuteculos y libros que se han escrito sobre Sor Juana y no dejan de aparecer tesis doctorales sobre los maacutes diversos temas conectados con la citada autora143 Como nos dice Stephanie Merrim en su documentada obra Early Modern Womenrsquos Writing and Sor Juana Ineacutes de la Cruz

She wrote and published on secular themes as atypical for a nun as human love Her remarkably extensive writings essayed and reenacted most of the (male) poetic dramatic theological and even philosophi-cal discourses of her times in the metropolis making her works a com-pendium of baroque culture in its diversity and syncretism Sor Juana self-creation as a learned women effectively toppled many of the walls in which she was materially enclosed and positioned her within the dynamic world of early modern European culture (xii)

No se debe dejar de mencionar a otras escritoras novohispanas de la eacutepoca que aun-que no fueron tan proliacuteficas y relevantes como Juana Ineacutes de la Cruz dejaron testimo-nio de algunos acontecimientos que tienen intereacutes socioloacutegico o testimonial Este es el caso de Dontildea Mariacutea Estrada Medinilla de igual nombre y apellido que la mujer que acompantildeoacute a las tropas de Corteacutes en su primera entrada a Meacutexico Natural de Meacutexico publicoacute toda su obra a mediados del siglo XVII concentraacutendose principalmente en la lle-gada del Marqueacutes de Villena virrey y capitaacuten general de la Nueva Espantildea a la ciudad de Meacutexico en el antildeo 1640 Escrita en octavas reales la obra trata de las fiestas de toros y cantildeas con que se obsequioacute al citado virrey Fue impresa en Meacutexico en 1641 (Serrano y Sanz 269 402)

Mucho maacutes importante para el presente libro es Dontildea Isabel de Guevara que escribioacute en 1556 la carta en que se expone la ayuda que ofrecieron las mujeres en el descubri-miento y conquista del Riacuteo de la Plata No cabe la menor duda de que esta carta es uno

142 Para una mejor comprensioacuten del caraacutecter de esta excepcional mujer veacutease entre los numeros trabajos publicados Fredo Arias de la Canal Intento de psicoanaacutelisis de Juana Ineacutes y otros ensayos sorjuanistas (Meacutexico Frente de Afirmacioacuten Hispanista 1972) 47

143 Veacuteanse entre otros trabajos Octavio Paz Sor Juana Ineacutes de la Cruz o las trampas de la fe Georgina Sabat de Rivers En busca de Sor Juana Margo Glantz Sor Juana la comparacioacuten y la hipeacuterbole Gerard C Flynn Sor Juana Ineacutes de la Cruz Stephanie Merrim Feminist perspectives on Sor Juana Ineacutes de la Cruz Pamela Kirk Sor Juana Ineacutes de la Cruz religion art and feminism

164 JUAN FRANCISCO MAURA

de los documentos maacutes importantes con que contamos en relacioacuten a la aportacioacuten fe-menina en el proceso de la conquista de Ameacuterica Su importancia viene dada por varios factores Primero es uno de los primeros testimonios mdashsi no el primeromdash en donde se expone abiertamente la indispensable colaboracioacuten de las mujeres en el descubrimien-to y conquista de tierras en el Nuevo Mundo laquoQue si no fuera por ellas todos fueran acabadosraquo En segundo lugar la informacioacuten vertida en estas liacuteneas presenta en parte la manera de pensar de una mujer espantildeola en tales circunstancias Extraordinario tes-timonio de primera mano que nos da una idea de lo que significoacute en muchos casos el valor y entrega constantes de muchas de estas mujeres que auacuten a riesgo de perder sus vidas no dudaron en luchar al lado de los hombres por una causa que consideraban laquocomuacutenraquo

La relevancia histoacuterica de dicha carta hace que merezca ser transcrita en su totali-dad

Carta de dontildea Isabel de Guevara a la princesa gobernadora dontildea Juana exponiendo los trabajos hechos en el descubrimiento y conquista del Riacuteo de la Plata por las mujeres para ayudar a los hombres y pidiendo repartimiento

para su marido Asuncioacuten 2 de julio de 1556

Muy alta y muy poderosa sentildeora

A esta provincia del Riacuteo de la Plata con el primer gobernador de ella don Pedro de Mendoza hemos venido ciertas mujeres entre las cuales ha querido mi ventura que fuese yo la una y como la armada llegase al puerto de Buenos Aires con mil quinientos hombres y les faltase el bastimento fue tamantildea el hambre que a cabo de tres meses murie-ran los mil esta hambre fue tamantildea que ni la de Jerusalem se le puede igualar ni con otra ninguna se puede comparar Vinieron los hombres en tanta flaqueza que todos los trabajos cargaban de las pobres mu-jeres asiacute en lavarles las ropas como en curarles hacerles de comer lo poco que teniacutean limpiarlos hacer centinela rondar los fuegos armar las ballestas cuando algunas veces los indios les veniacutean a dar guerra hasta cometer a poner fuego en los versos y a levantar los soldados los que estaban para ello dar arma por el campo a voces sargentean-do y poniendo en orden los soldados porque en este tiempo como las mujeres nos sustentamos con poca comida no habiacuteamos caiacutedo en tanta flaqueza como los hombres Bien creeraacute V A que fue tanta la so-licitud que tuvieron que si no fuera por ellas todos fueran acabados y si no fuera por la honra de los hombres muchas maacutes cosas escribiera con verdad y los diera a ellos por testigos Esta relacioacuten bien creo que la escribiraacuten a V A maacutes largamente y por eso cesareacute Pasada esta tan peligrosa turbunada determinaron subir el riacuteo arriba asiacute flacos como estaban y en entrada de invierno en dos bergantines los pocos que quedaron vivos y las fatigadas mujeres los curaban y los miraban y les guisaban la comida trayendo la lentildea a cuestas fuera del naviacuteo y animaacutendolos con palabras varoniles que no se dejasen morir que presto dariacutean en tierra de comida metieacutendolos a cuestas en los

165ESPANtildeOLAS DE ULTRAMAR EN LA HISTORIA Y EN LA LITERATURA

bergantines con tanto amor como si fueran sus propios hijos Y como llegamos a una generacioacuten de indios que se llaman tinbues sentildeores de mucho pescado de nuevo los serviacuteamos en buscarles diversos modos de guisados porque no les diese en rostro el pescado a causa de que lo comiacutean sin pan y estaban muy flacos Despueacutes determinaron subir el Paranaacute arriba en demanda de bastimento en el cual viaje pasaron tanto trabajo las desdichadas mujeres milagrosamente quiso Dios que viviesen por ver que en ellas estaba la vida de ellos porque todos los servicios del naviacuteo los tomaban ellas tan a pechos que se teniacutea por afrentada la que menos haciacutea que otra sirviendo de marear la vela y gobernar el naviacuteo y sondar de proa y tomar el remo al soldado que no podiacutea bogar y escotar144 el naviacuteo y poniendo por delante a los soldados que no se desanimasen que para los hombres eran los trabajos verdad es que a estas cosas ellas no eran apremiadas ni las haciacutean de obliga-cioacuten ni las obligaba si solamente la caridad Asiacute llegaron a esta ciudad de la Asuncioacuten que aunque ahora estaacute muy feacutertil de bastimentos en-tonces estaba de ellos muy necesitada que fue necesario que las muje-res volviesen de nuevo a sus trabajos haciendo rosas con sus propias manos rosando y carpiendo y sembrando y recogiendo el bastimento sin ayuda de nadie hasta tanto que los soldados guarecieron de sus fla-quezas y comenzaron a sentildeorear la tierra y adquirir indios e indias de su servicio hasta ponerse en el estado en que ahora estaacute la tierra He querido escribir y traer a la memoria de V A para hacerle saber la ingratitud que conmigo se ha usado en esta tierra porque al presente se repartioacute por la mayor parte de los que hay en ella asiacute de los anti-guos como de los modernos sin que de miacute y de mis trabajos se tuviese ninguna memoria y me dejaron de fuera sin me dar indio ni ninguacuten geacutenero de servicio Mucho me quisiera hallar libre para me ir a presen-tar delante de VA con los servicios que a SM he hecho y los agravios que ahora se me hacen mas no estaacute en mi mano porque estoy casada con un caballero de Sevilla que se llama Pedro de Esquivel que por servir a SM ha sido causa que mis trabajos quedasen tan olvidados y se me renovasen de nuevo porque tres veces le saqueacute el cuchillo de la garganta como allaacute VA sabraacute A que suplico mande me sea dado mi repartimiento perpetuo y en gratificacioacuten de mis servicios [en el origi-nal del AHN Diversos doc 141 dice ademaacutes mande que sea proveydo mi marido de alguacuten cargo conforme a la calidad de su persona pues el de su parte por sus servicios lo merece] lo merece Nuestro sentildeor acre-ciente su Real vida y estado por muy largos antildeos De esta ciudad de la Asuncioacuten y de julio 2 1556 antildeosServidora de V A que sus Reales manos besa

Dontildea Isabel Guevara

144 Sacar agua de un riacuteo acequia o presa

166 JUAN FRANCISCO MAURA

Sobremdash A la muy alta y muy poderosa sentildeora Princesa dontildea Joana Gobernadora de los reinos de Espantildea etc ndash En su Consejo de Indias (Isabel de Guevara 619-21)

Iroacutenicamente la carta teniacutea que llegar a manos de la desdichada heredera del trono de Castilla e hija de los Reyes Catoacutelicos Juana laquola Locaraquo que habiacutea muerto el antildeo an-terior Son profeacuteticas las palabras de esta mujer no soacutelo porque sus hechos personales quedasen en el olvido sino porque incluso se ha borrado la historia de las mujeres en el Nuevo Mundo negando su presencia Por lo menos Isabel Guevara tuvo acceso a una pluma iquestCuaacutentas seriacutean las que ni siquiera sabriacutean escribir

Otra contemporaacutenea fue dontildea Leonor de Iciz que vivioacute durante la segunda mitad del siglo XVI Interesa sobre todo por los sonetos que escribioacute en elogio de Ercilla soldado que participoacute en la conquista de Chile y que se inmortalizoacute con su obra La Araucana (Serrano y Sanz 269 534) Lo mismo hizo Dontildea Bernarda Lintildeaacuten en 1610 autora de otro soneto en memoria del capitaacuten Gaspar Peacuterez de Villagraacute que participoacute en la conquista de Nuevo Meacutexico (Serrano y Sanz 270 14) Los escritos de estas mujeres tratan de de dos de las eacutepicas maacutes dramaacuteticas de la conquista

En el Peruacute y en pleno siglo XVII aparece otra fundadora de conventos Sor Bernardina de Jesuacutes que ademaacutes fue comparada con Santa Teresa por la semejanza de sus laquocartasraquo con las de la santa de Avila Fue fundadora del convento de Tacunga en Quito maacutes tarde destruiacutedo por un terremoto Dice Serrano y Sanz con respecto a su biografiacutea un tanto legendaria que fue carmelita descalza de Lima y hermana de Dontildea Mariacutea Benavides y Esquivel abuela de D Pedro de Peralta Barnuevo (Serrano y Sanz 269 553) Dicen que esta santa se alimentoacute durante treinta antildeos con laquochochos y caacutescaras de naranja hecho tan raro como increiacuteble Cuando fallecioacute reparaban las monjas en ponerle una vara de azucenas porque habiacutea sido casada y aquellas flores aparecieron milagrosamente sobre el cadaacuteverraquo (Serrano y Sanz 269 553)

Otra limentildea del primer cuarto del siglo XVII con reputacioacuten de santa fue Dontildea Luisa Melgarejo En este caso no se trata de una religiosa de oficio sino de la mujer del doctor Juan de Soto La uacutenica diferencia es que dontildea Luisa al parecer teniacutea laquovisiones y reve-lacionesraquo lo que debioacute poner nervioso a maacutes de un miembro del tribunal del laquoSanto Oficioraquo que consideraron sus escritos laquoculpadosraquo De su papel de laquosantaraquo pasa por lo tanto al de laquoposesaraquo o laquoendemoniadaraquo El inquisidor de Lima Gaitaacuten escribioacute un infor-me donde a traveacutes de la opinioacuten puacuteblica y de otras averiguaciones se deciacutea que dontildea Luisa Melgarejo laquomujer santaraquo sabiacutea cuando las almas de los difuntos saliacutean del Purga-torio El diacutea 14 de noviembre de 1623 se decidioacute tomar posesioacuten de todos los cuadernos en los que habiacutea escrito las experiencias de todos sus laquoarrobos suspensiones extasis y revelacionesraquo Estos cuadernos una vez recogidos presentaron toda una serie de al-teraciones borrones adiciones enmiendas incluso diferente letra por lo que despueacutes de haber sido examinados resultaron culpables145 Excelente imaginacioacuten debioacute tener dontildea Luisa Melgarejo la suficiente al parecer para convencer a algunos miembros de la iglesia de que en sus escritos laquohabiacutea algoraquo que mereciacutea la pena Estas cosas ocurriacutean en Lima uno de los centros culturales maacutes importantes de la vida social y poliacutetica en la Ameacuterica espantildeola Lima a comienzos del siglo XVII seguacuten el empadronamiento llevado

145 Serrano y Sanz 270 47 Veacutease J T Medina Historia del tribunal del Santo Oficio de la Inquisicioacuten de Lima (1569-1820) (Santiago Imprenta Gutemberg 1887) Tomo II 34-41

167ESPANtildeOLAS DE ULTRAMAR EN LA HISTORIA Y EN LA LITERATURA

a cabo en 1614 por el marqueacutes de Montesclaros era una ciudad de 25000 habitantes de los que 11000 eran espantildeoles El nuacutemero de religiosos y religiosas llegaba a 1720 (Pittaluga 77)

Se sabe que en la Isla de Santo Domingo durante el siglo XVI nacioacute o al menos resi-dioacute una poeta de ceacutelebre apellido en los aconteceres del Nuevo Mundo Dontildea Elvira de Mendoza de la que se conserva un manuscrito en la Real Academia de la Historia laquoCantares miacuteos que estaacuteis rebeladosraquo Eugenio de Salazar hace un elogio de ella como poeta en un Soneto a la ilustre Poeta y Sentildeora Dontildea Elvira de Mendoza moradora en la ciudad de Santo Domingo (Serrano y Sanz 270 53)

Nacida en Burgos sobre el antildeo 1590 dontildea Luisa de Padilla merece un lugar aparte dentro del grupo de mujeres escritoras de su eacutepoca Por su estilo faacutecil y castizo su no-vedad de pensamientos y su rica erudicioacuten recibioacute el siguiente comentario de Manuel Serrano y Sanz laquoPocas figuras hay en nuestra historia literaria femenil que puedan compararse a esta eminente prosista acaso la maacutes notable de cuantas florecieron en Es-pantildea durante el siglo XVIIraquo (Serrano y Sanz 270 95-96) Este comentario y comparacioacuten deberiacutea ampliarse para que tambieacuten incluyese a laquola historia literaria varonilraquo

Dontildea Luisa fue defensora de la labor que la Inquisicioacuten estaba realizando en la laquolim-piezaraquo de mujeres laquosoldados del demonioraquo que existieron en algunas provincias espa-ntildeolas en aquel tiempo Muchas de las mujeres que combinaban la magia con los po-deres curativos fueron condenadas no solamente por hombres de la Inquisicioacuten sino tambieacuten por mujeres de todas las clases sociales como es el caso de Luisa de Padilla condesa de Aranda En su obra Elogios de la verdad e invectiva contra la mentira preveniacutea contra aquellos que practicaban artes en contra de la religioacuten cristiana La magiacutea negra seguacuten Padilla era la causante de que muriesen casi tantas personas como otras causas naturales habieacutendose descubierto hasta seis mil brujas en Vizcaya y Guipuzcua con-fesando una mujer de un pueblo pequentildeo haber matado con su laquomagiaraquo a ochocientas personas (Perry 31) Eran estos laquomales de ojoraquo y maldiciones seguacuten la autora las causas de que se secasen los pechos de las madres lactantes que se separasen las parejas casa-das y que abortasen las embarazadas (Perry 31)

Si se tiene en cuenta que dontildea Luisa estuvo emparentada con la maacutes rancia aristocra-cia de su tiempo o lo que es lo mismo con algunos de aquellos que en cierta manera dirigiacutean los destinos de Espantildea en aquella eacutepoca (Duques de Lerma Duque de Uceda Marqueacutes de Cueacutellar Conde de Santa Gadea Marqueacutes de Belmonte por citar algunos) se comprenderaacute mejor su identificacioacuten con una institucioacuten que en teoriacutea velaba por la salvaguarda de los valores laquoeternosraquo de una Espantildea destinada a ser la campeona del ca-tolicismo durante los siglos XVI y XVII El padre de dontildea Luisa fue don Martiacuten de Padilla y Manrique extraordinario militar que proboacute su valor contra enemigos moriscos ingle-ses holandeses piratas berberiscos y el renegado genoveacutes Muley Faxad Fue veterano de la batalla de Lepanto donde apresoacute a cuatro galeras y acompantildeoacute con su escuadra a la reina Dontildea Margarita de Austria cuando vino de Geacutenova en 1598 laquoHabiacutea obtenido a 24 de julio de 1587 el tiacutetulo de Conde de Santa Gadea y en 1596 el de Capitaacuten General de la Armada del mar Oceacuteanoraquo (Serrano y Sanz 27095-96)

Por otra parte tambieacuten se sabe que dontildea Luisa participoacute directamente y desde tem-prana edad en la praacutectica de algunas actividades intelectuales como la historia y la arqueologiacutea a la vez que dedicaba su tiempo a virtudes cristianas como la caridad y el socorro de los necesitados (Serrano y Sanz 270 97) Resulta mucho maacutes faacutecil compren-

168 JUAN FRANCISCO MAURA

der la postura ideoloacutegica de esta gran mujer si tienen en cuenta ademaacutes de los factores antes mencionados otros tantos de caraacutecter biograacutefico concernientes a su educacioacuten y matrimonio

Otra escritora fue la mexicana dontildea Mariacutea Casilda Pozo natural de Temestla (Meacutexi-co) Nacida en el mes de abril de 1682 dejoacute escrita su biografiacutea en 16 cuadernos el ma-nuscrito original se encuentra en la biblioteca del colegio de San Gregorio de Meacutexico Fue su confesor el jesuiacuteta Domingo Quiroga que fue quieacuten la incitoacute a escribir su obra (Serrano y Sanz 270 137) Sor Juana de San Antonio aparece a principios del siglo XVII formando parte de un grupo de religiosas espantildeolas que fueron a Manila por la ruta de Meacutexico Ademaacutes de distinguirse por sus cualidades personales su obra interesa por ofrecer informacioacuten testimonial y costumbrista acerca de la forma de vestir de chinos y japoneses (Serrano y Sanz 270 225)

Otra monja esta vez ecuatoriana fue Gertrudis de San Ildefonso Nacida en 1652 profesoacute su vocacioacuten en el convento de Santa Cruz de Quito dejando escrita su vida por mandato de su confesor el padre Martiacuten de la Cruz el cual hizo una biografiacutea laquoen tres gruesos voluacutemenesraquo Gertrudis de San Ildefonso murioacute en 1709 (Serrano y Sanz 270 300) en olor de santidad

Sor Mariacutea Ana Agueda de San Ignacio nacioacute el 3 de marzo de 1695 en la dioacutecesis de la puebla de los Angeles en un rancho del lugar de Santiago Tecaliacute (Serrano y Sanz 270300) Esta monja mexicana escribioacute varias obras durante su vida conventual a lo largo de la cual desempentildeoacute el cargo de priora por muchos antildeos Entre sus obras todas de caraacutecter piacuteo y de laquoamor divinoraquo escribioacute un curioso y laquocopiosoraquo tratado de la Leche virginal de la Soberana Madre de Dios El padre Fr Juan de Villa Saacutenchez hace el siguiente comentario al respecto laquoen que hablando primero en sentido natural de los beneficios que debemos a Nuestra Sentildeora pasa a tratar en sentido miacutestico y alegoacuterico enten-diendo en la leche la doctrinaraquo (Serrano y Sanz 270301) Mexicana fue tambieacuten Sor Petronila de San Joseacute que ejercioacute como abadesa del Real monasterio de Jesuacutes Mariacutea de la ciudad de Meacutexico Escribioacute Vidas de varias religiosas ejemplares obra que tiene su im-portancia ya que al parecer laquoDe esta obra se sirvioacute D Carlos de Siguumlenza y Goacutengora para escribir su Parayso Occidental (Meacutexico 1684) seguacuten eacutel mismo declara en el proacutelogo diciendo lsquoa quien si hay algo bueno en esta historia se le debe todorsquoraquo (Serrano y Sanz 270 354) Menos conocida fue su compatriota Sor Luisa de Santa Catalina natural de Xacona laquopueblo situado en las inmediaciones de Zamora (Meacutexico)raquo siendo bautizada en 1682 Escribioacute Cartas espirituales a su confesor el P Juan Loacutepez de Aguado (Serrano y Sanz 270 361-62)146

Todos estos escritos la mayoriacutea de ellos ignorados por el gran puacuteblico tienen la im-portancia de darnos una perspectiva diferente En otras palabras ensentildearnos la maacutes refinada sensibilidad de muchas mujeres que permanecieron y en su mayoriacutea siguen permaneciendo a laquooscurasraquo de una eacutepoca tan rica de la literatura espantildeola como fue el Siglo de Oro Este siglo fue tambieacuten en su dimensioacuten literaria y artiacutestica patrimonio de la mujer

146 Para profundizar en muchas de estas escritoras hispano-americanas la consulta de la Biblioteca Hispano-Americana de Beristain de Souza resulta de capital importancia

169ESPANtildeOLAS DE ULTRAMAR EN LA HISTORIA Y EN LA LITERATURA

Sor Nada ardores divinos de una monja adolescente escritos ineacutedi-tos de una recieacuten profesa del siglo XVI147

iexclQueacute encantadores son tus amores hermana miacutea espo-sa iexclQueacute deliciosos son tus amores maacutes que el vino Y el aroma de tus perfumes es mejor que el de los baacutelsamos Miel virgen destilan tus labios esposa miel y leche hay en tu lengua y el perfume de tus vestidos es como aroma de incienso (Cantar de los Cantares 4 10-11)

Sor Nada llamada asiacute por humildad seguacuten dice el Indice de manuscritos de la Biblio-teca Nacional de Madrid es uno de los ejemplos maacutes desconocidos e interesantes que tenemos de la poesiacutea y prosa amoroso-religiosa del siglo XVII Hasta la fecha nunca se habiacutea publicado su obra e incluso hasta el antildeo 1995 para mi sorpresa no habiacutea copias microfilmadas de sus manuscritos en la Biblioteca Nacional Serrano y Sanz en su libro Apuntes para una Biblioteca de Escritoras Espantildeolas hace una escueta y pasajera mencioacuten de esta mujer y de su obra (68-69) siendo eso todo lo que hasta ahora se sabiacutea de ella Sus escritos consisten en los siguientes manuscritos

1 laquoEn queacute consiste un verdadero amor de Diosraquo 9 hojas uacutetiles en 4ordm letra del siglo XVII Biblioteca Nacional de Espantildea Manuscrito 1295926

2 laquoPintura del Propio Amorraquo laquoPintura del propio Amorraquo 10 hojas uacutetiles en 4ordm letra del siglo XVII Biblioteca Nacional de Espantildea Manuscrito 1295927

3 laquoEsplicacioacuten sobre en queacute consiste la paz del Almaraquo laquoQuartillas aacute un Alma que padece soledad interiorraquo 7 hojas uacutetiles en 4ordm letra del siglo XVII Biblioteca Nacio-nal de Espantildea Manuscrito 1295828

En cuanto a su persona soacutelo se nos dice que laquose encubrioacute con este seudoacutenimo laquoSor Nadaraquo Esta monja desconocida de origen hispanoamericano posee toda la frescura e ingenuidad de una joven apasionada metida por vocacioacuten u obligacioacuten a ejercer la profesioacuten maacutes comuacuten para mujeres de cierta clase social de su tiempo En sus liacuteneas podemos encontrar un misticismo simple incluso en algunos momentos infantil pero a su vez lleno de una fuerza y sensualidad interior poco comuacuten en escritos de este geacute-nero que desborda los liacutemites del laquoamor divinoraquo a traveacutes de los diaacutelogos entre el Alma y el Esposo Sor Nada consigue proyectar su amor a Dios maacutes allaacute de una experiencia romaacutentica Su experiencia es sincera y genuinamente miacutestica trascendiendo la imita-cioacuten o la propia creacioacuten poeacutetica ficcionalizada (Hatzfeld 30) Algunos pasajes son de un

147 Veacutease mi artiacuteculo Sor Nada ardores divinos de una monja adolescente escritos ineacuteditos de una monja profesa del siglo XVIIraquo Espeacuteculo Revista de estudios literarios 26 (2004) 1-10 Universidad Complutense de Madrid http wwwucmesinfoespeculonumero26sornadahtml

170 JUAN FRANCISCO MAURA

alto contenido eroacutetico con sustantivos y metaacuteforas que recuerdan la maacutes iacutentima unioacuten amorosa en unos casos y el tierno amor maternal en otros

[T]e miro Jesus mio desnudo a las inclemencias del tiempo y ardien-do en puro fuego de Amor por la salud de las Almas y me ensentildeas a que te ame con todo mi corason y puresa de espiritu No atendiendo ni buscando umanos intereses ni a solisitar consuelos ni regalos espi-rituales que suelen empantildear la puresa del noble corason No mi Jesus amable pues antes me ensentildeaste tu puro Amor que desnudo sean [sic] de encaminar mis passos desde el pesebre asta la cuna en donde te miro tan desnudo como el pesebre y todo Sentildeor por mi Amor (Mss 12959 26 hoja 1 v)

El manuscrito (12959 27) de la mencionada serie de tres contiene algunas correccio-nes quizaacute hechas por el confesor o quizaacute por ella misma cuando se dirige con excesiva familiaridad y arrebatado fervor a su Amado148 He escogido el manuscrito (12959 Caja 28) en primer lugar por ser el ejemplo maacutes representativo de su poesiacutea y prosa En este manuscrito encontramos de forma maacutes directa que alegoacuterica toda la frescura de un diaacutelogo entre Jesuacutes y el alma que raya como diriacutea Cervantes laquoa la llana y sin rodeosraquo (667 lib 2 cap 38) con el doloroso y a veces desesperado deseo de la entrega y la unioacuten final con el Amado La ortografiacutea no ha sido corregida respetaacutendose el texto ori-ginal149 Veamos el siguiente fragmento

Mira que te amo con Amor de padre y con Amor de esposo el mas fino y puro enamorado que no tan solo me presio de darte mi mano sino tambien todo mi cuerpo y sangre para que con mi pan de vida te sustentes y te regales a tus anchuras y que con mi propio espiritu vivas en paz como tu lo deseas y que mis amores sean unico alivio en tus trabajos en esta mortal vida pues si esto es asi y sabes que muero por darte vida dime esposa mia de que te fatigas Dame querida tus bras-sos y dime si me amas como yo te amo (Hoja 4)

148 La antologiacutea de Promis ha procurado insertar entre los textos antoloacutegicos algunos que se refieren a la es-critura de mujeres fundamentalmente de aquellos generados en el interior de los espacios conventuales Estos textos se fundan como laquohistorias de vidasraquo y responden casi siempre a los requerimientos de los confesores de las monjas coloniales En este sentido resulta valiosiacutesima la incorporacioacuten de la llamada Relacioacuten autobiograacute-fica de Sor Ursula Suaacuterez como una muestra significativa de la escritura monjil entendida en esta eacutepoca (como tambieacuten en la tradicioacuten europea medieval) inserta en las denominadas laquolabores de manoraquo de las religiosas ya que el texto escrito por mandato se convertiacutea en una suerte de entramado o tejido linguumliacutestico es decir en un nuevo bordado que la mayor parte de las veces el confesor convertido en censor iba haciendo tachando y enmendando En la antologiacutea Promis agrega un texto de Sor Tadea Garciacutea de la Huerta titulado Relacioacuten de la inundacioacuten que hizo el riacuteo Mapocho de la ciudad de Santiago de Chile en el monasterio de Carmelitas titular de San Rafael el diacutea 16 de junio de 1783 se trata de un poema tipo romance escrito en versos octosilaacutebicos y que da cuenta de lo sucedido ese diacutea en el convento (Resentildea de la literatura del reino de Chile de Joseacute Promis Eddie Morales Pintildea httpwwwupaclpublicaciones2002literatura_promishtm)

149 Son frecuentes las faltas ortograacuteficas Una de ellas es el uso constante del seseo La ausencia de acentua-cioacuten y puntuacioacuten exceptuando alguacuten punto o coma arbitrario no seguido casi nunca de mayuacutescula inicial lo mismo que el uso igualmente aribitrario de la h o de b v r q g j m n x etc No olvidemos de la misma forma la laxitud linguumliacutestica existente en el siglo XVII (no sabemos a queacute parte de eacuteste pertenece el manuscrito) asiacute como la joven edad de la monja

171ESPANtildeOLAS DE ULTRAMAR EN LA HISTORIA Y EN LA LITERATURA

Los versos del presente manuscrito poseen la misma fuerza que tiene su prosa Con una estructura estroacutefica indefinida estaacuten aparentemente corregidos por alguien que tu-vo la oportunidad de conocer personalmente a la autora Muy probablemente se trate del padre al que hace referencia al principio del primer manuscrito laquoMandame el Pd que le declare en que consiste un verdadero amor a Diosraquo a continuacioacuten continuacutea con su caracteriacutestica humildad laquo[O]bedesere y dire lo q Dios me inspire segun mi rudesa y simplisidadraquo (Mss 12959 26) En cuanto a la fuerza pasional de esta joven observamos con cierta tristeza coacutemo aparece sublimada en sus escritos con toda la enegiacutea de una joven mujer llena de intensidad y vida pero encerrada en los liacutemites de un convento Veamos un ejemplo en donde responde el Alma en los siguientes versos

O mi enamorado Jesus O mi dulse y tierno amanteO alegria de los sielos O dulse Jesus amable

(Toda Sentildeor me derrito toda Sentildeor me desagoy quiero vivir por ti ea sentildeor abrasadme) [Tachado en el original]

Toda Sentildeor me derrito toda Sentildeor me desagoy quiero morir por vos ea Sentildeor que ya acabo

Ya tus amores me llaman ya tus perfumes me traencon suspiros y agonias Sentildeor hasta que te alcanse

O mi Jesus amoroso no puedo mas dilatarmeya la pasiensia me falta dulse Jesus abrasadme

(No puedo vivir sin vos no puedo mas dilatarmeya la pasiensia me falta dulse) [Tachado en el original]

No puedo vivir sin vos mi dulse Jesus amablepues me teneis echisada siendo mi esposo y mi Padre

Ay que me abraso Ay que me quemo del Amor deJesus nasareno como no tocan y tantildeen a fuego150

Estos versos llenos de arrebato sublimado conectan con toda la tradicioacuten miacutestica es-pantildeola que se remonta a Ramoacuten Llul y que culmina en el maacutes universal de nuestros

150 En toda la fuerza y simbologiacutea del amor maacutes iacutentimo del maacutes alto y sublime placer de la unioacuten de los amantes tal como lo encontramos en el Cantar de los Cantares y en San Juan de la Cruz Leemos en la Biblia

Ya me he quitado la tuacutenica iquestCoacutemo volver a vestirme Ya me he lavado los pies iquestCoacutemo volver a ensuciarlosMi amado metioacute su mano por el agujero (de la llave) y mis entrantildeas se estremecieron por eacutel Me levanteacute para abrir a mi amado Mis manos destilaron mirra y mis dedos mirra exquisita en el pestillo de la cerradura (5 3-5)

Nos ocurre lo mismo con San Juan de la Cruz en su insuperable poema laquoLlama de amor vivaraquo

iexclOh cauterio suaveiexclOh regalada llagaiexclOh mano blanda iexclOh toque delicadoque a vida eterna sabey toda deuda pagaMatando muerte en vida la has trocado

172 JUAN FRANCISCO MAURA

miacutesticos San Juan de la Cruz Esta tradicioacuten se extiende hasta finales del siglo XVII esto es hasta los finales del Barroco siendo un poco maacutes tardiacuteo en la Ameacuterica espantildeola Sin tener como propoacutesito discutir en el presente trabajo a queacute corriente miacutestica pertenece la obra de Sor Nada es necesario resaltar no obstante el hecho de que estaacute escrito por una mujer y ademaacutes de tierna edad El manuscrito 12959 Caja 26 termina con estas pa-labras laquo[T]odas estas boverias escrivi por entretenimiento siendo resien profesa en la religion Sor Nadaraquo Mas no por la juventud de su autora los escritos dejan de tener lo-gradas metaacuteforas imaacutegenes y siacutembolos sacados de la naturaleza La alegoriacutea de la unioacuten matrimonial poseeacute el fuego liacuterico de la maacutes apasionada de las relaciones amorosas vivi-ficada por perfumes flores insectos animales escarchas nieves o abrojos Por lo tanto aunque la narracioacuten destile cierta ingenuidad no carece por ello de un vocabulario rico con el sabor popular de la poesiacutea de los cancioneros y romances de tradicioacuten renacen-tista No ha sido otra mi intencioacuten que la de rescatar del olvido unos escritos en prosa y en verso llenos de frescura y espontaneidad que nos muestran la pasioacuten con que la joven novicia se laquoentrega en cuerpo y almaraquo a los menesteres de su profesioacuten guiada por un padre espiritual en esos primeros antildeos de formacioacuten Esta ha sido la razoacuten por la que presento a continuacioacuten el citado manuscrito en su totalidad

Sor Nada (Mss 1295928)

laquoEsplicacion sobre en que consiste la paz del AlmaraquolaquoQuartillas a un Alma que padece soledad interiorraquo

[7 hojas utiles en 4ordm letra del siglo XVII]

+

Esplicacion sobre en que consiste la paz del Alma

Pareseme segun mi rudo entender que la verdadera paz del Alma con-siste en una muy pura y buena consiencia en un corason liso y bien intensionado en una verdadera rectitud de espiritu en el qual el Alma procura bolar a Dios sin jamas detenerse a respetos umanos ni reparar en que me diran ni de que me censuraran sino me apresuro a seguir a unos entenderes y pareseres dorados en los quales pretende el mundo engantildear y ensuciar si se puede la puresa de un corason unicamente de Dios y de su Santa ley y se lo conserva cristalino con la divina asis-tencia de la gracia y comprendido de su Amor y temor siguiendo la luz divina de tan amante Sentildeor Dios y ombre verdadero con que este ilustrado corason ni se altera ni se mueve por los disfrasses dorados que ase el mundo y sus moradores mayormente con falssas amistades aunque con ellos muestre buena intension Con la misma grasia y luz de Dios conose el buen corason estos disfrasses que le ase el mundo y se retira de todo con espiritu y valor esto sin la menor alterasion sino que en suma paz se retira a buscar a Dios dentro de su mismo corason

173ESPANtildeOLAS DE ULTRAMAR EN LA HISTORIA Y EN LA LITERATURA

y se abrasa con su pura verdad en la qual se le descubren mil interio-res secretos tan solidos puros y verdaderos que la misma Alma queda abismada y de puro grandes no los puede bien comprender ni esplicar pero estos mismos secretos divinos le sirven de espuelas para no solo correr sino bolar con pies de plumas en seguimiento de su bien ama-do Jesus y como este soberano Sentildeor es tan amante de sus espossas las Almas luego que la ve bolar con pies de plumas la sale al encuen-tro en despoblado campo que se deve de llamar Campo de Amor de Dios y el mismo Sentildeor se viene a las manos por ser Dios que nos ama con Amor infinito de Padre benigno y amoroso con que asiendose en contra deso este divino enamorado en lo interyor de el Alma que le busca con ansias de servirle y amarle y en aquella soledad traban una conversasion amorosa y sensilla como la pluma simple de quien esto escrive

Divino enquentroDios y el Alma en la soledad

O Soberano Principe de la paz dise el Alma tus perfumes me traen a ti bolando porque alla en el mundo y sus valedores me pretendian engantildear y entretenerme con pegaminossas amistades que facilmen-te me pudieran envenenar y matarme apartandome de ti Mi dulse Jesus amable mi Redentor Soberano que con tantas ansias me sales al enquentro como siervo [ciervo] erido de mis Amores los quales tu Amor me ofrese para que con tu mismo Amor te ame y te sirva en paz sin perturbarme ni contristarme ni cansarme de padeser pasando si se ofrese por escarchas nieves espinas ni abrojos ni por otros diverssos trabajos ni piedras de contradision que tu me puedes permitir pues por mas que el mar se levante con sus ferosses olas contra mi ni piedras se me tiren al rostro en todo Sentildeor me quieres con serenidad pasifica sin la menor perturbasion Todo Sentildeor quieres que lo tome con Serenidad de espiritu y asi vengo a ti bolando para que mejor me ensentildees a vivir segun las leyes de tu noble condision que me son muy agradables por mas que el mundo me las despresie por segir sus vanidades y torsidas intensiones con apariensias de bien y con este engantildeo y bien me quie-ro mas a mi que no a mi proximo veo que segun mi pareser se pierden muchas Almas y tambien de aquellos que se depresian y pasan por muy espirituales Con que me paresen pocos los que llegan a padeser con desnudes151 de espiritu por tu purisimo Amor y me parese essas se quedan muy atrasadas en la virtud por el peligro de bolver muy atras el paso de modo que se pueden despentildear y pereser en su misma desgra-sia ya por soberbia o por otras enfermedades que se les pega al corason y asi lo pasan como siegos ignorantes sin advertir en sus peligros

151 La letra en cursiva es miacutea

174 JUAN FRANCISCO MAURA

este aquerdo Sentildeor y otros que tu verdad me ensentildea me ase venir uyendo de las paredes del mundo y me vengo a ti Dios mio bolando con las dos Alas del Amor y temor que tu mismo Amor me ofrese tan de gracia y tan de grado que no se duentildeo mio con que lo responder a tan soberano beneficio y finesa de tus entrantildeas de Amorvengo Sentildeor y esposo mio unicamente a descansar en ti pues los peli-gros del camino me an puesto en mucho sobresalto temiendo el per-derte y sin ti perderme para siempre por una eternidad sin fin pues deseo amado mio ganarme ganandote a ti y vivir en ti aora en vida y despues eternamente y estos cuidados me traen fatigada molida y cansada y no podre tener alivio y descanso sino viendome entre tus brassos aunque sea estando en cruz pues ese es el fin de mis deseos vivir y morir en ti ablame mi cordero manso y ensentildeame a que ver-daderamente te ame como fiel esposa ea mi caro amigo dame la ma-no pues sabes Amor mio que en mi no ay mano sin tu misma mano y asi mi Dios y Sentildeor mi Principe Soberano con umilde rendimiento y deseos de alcansarte te suplico me des la mano y me consueles en estos mis trabajos Deseo Sentildeor vivir en paz y los malos amores de mi Naturaleza flaca no me dejan detentar y no quieren por mi desgrasia atropellar con las leyes de tu Amor ni quisiera perturbar mi corason quando me veo con un torvellino de olas y contratiempos que a menu-do me suelen sercar pero si tu Sentildeor me das la mano nada temo sino que me aseguro y vivire en paz sin que me fatiguen los contratiempos pues mi mano en la tuya y mi espiritu en el tuyo por mas borrascas que me envistan no seran bastantes para rendir mi voluntad a la suya bien si para pronunsiar un fiat que resuene bien atras en tus oidos y que en medio de mis fatigas me ponga a cantar tus divinas misericor-dias hea Sentildeor ya pretendo serrar mis labios por no desir mas bove-rias y deseo Sentildeor oir tus palabras de vida eterna abla Sentildeor que tu sierva oye con atension y cuydado mira mi Dios que se me ase tarde y espero con prisa deseando saborearme y aprovecharme de los ecos de tu Santa dotrina pues todas tus palabras saben a eterna vida callen pues mis sentidos y potensias y todo se ponga en paz pues mi dulse y soberano Sentildeor no se escusara de ablar me aun que en mudo silensio hea mi gran Prinsipe de la paz ablame que tus puros amores me traen perdida por estos asperos montes y mis cortos pasos no te pueden dar alcanse mirame mi Dios a tus pies postrada como un vil gusano y me-nor ormiga de la tierraabla Jesus y dise a su esposa el Alma querida esposa mia que me pides y por que te muestras tan fatigada y mal sufrida no vives como corde-rita del campo buscando de mis pechos el sustancial pasto mi Amor no te sustenta y mi grasia te promete eterna vida pues dime amada de que te fatigas y te muestras mal sufrida mira que te amo con Amor de padre y con Amor de esposo el mas fino y puro enamorado que no tan solo me presio de darte mi mano sino tambien todo mi cuerpo y

175ESPANtildeOLAS DE ULTRAMAR EN LA HISTORIA Y EN LA LITERATURA

sangre para que con mi pan de vida te sustentes y te regales a tus an-churas y que con mi propio espiritu vivas en paz como tu lo deseas y que mis amores sean unico alivio en tus trabajos en esta mortal vida pues si esto es asi y sabes que muero por darte vida dime esposa mia de que te fatigas Dame querida tus brassos y dime si me amas como yo te amoResponde el Alma152 Tu mi Dios sabes si yo te amo pues de mi solo se que mis deseos y ansias buelan a ti mas no alcanso a saber si te amo como tu de-seas ser amado y como desconfio tanto de mi y de mis prosederes falssos temo Dios mio perderme y perderte y asi Sentildeor pues no desechas mis Amores y te muestras tan fino en amarme te pido me ensentildees a vivir segun las leyes de tu pura verdad y fina condisionhija mia dise Dios la prueva de un verdadero Amor consiste en sufrir callar y padeser por mi unico Amor y en todo seguir mis pasos sin ja-mas retroseder por mas fragoso que se muestre el camino pues nunca seran tantas las espinas las escarchas ni las nieves ni los vientos bo-rrascosos que te se ofrescan pasar por mi Amor como los que mi tierno y desinteresado Amor paso por ti y siempre con mis pies descalssos y asi hija y esposa mia muestrate costante en seguir lo perfecto de mis passos pues mi braso fuerte sera en ti y peleara por ti y te sera el todo en tus nesesidades y mi Amor te convertira en dulse y suave lo amargo y molesto a la condision de la carrne

Responde el Alma

O mi enamorado Jesus O mi dulse y tierno amanteO alegria de los sielos O dulse Jesus amable

(Toda Sentildeor me derrito toda Sentildeor me desagoy quiero vivir por ti ea sentildeor abrasadme) [Tachado en el original]

Toda Sentildeor me derrito toda Sentildeor me desagoy quiero morir por vos ea Sentildeor que ya acabo

Ya tus amores me llaman ya tus perfumes me traencon suspiros y agonias Sentildeor asta que te alcanse

O mi Jesus amoroso no puedo mas dilatarmeya la pasiensia me falta dulse Jesus abrasadme

(No puedo vivir sin vos no puedo mas dilatarmeya la pasiensia me falta dulse) [Tachado en el original]

No puedo vivir sin vos mi dulse Jesus amablepues me teneis echisada siendo mi esposo y mi Padre

152 La aparicioacuten de una mayuacutescula al principio de una oracioacuten es algo totalmente arbitrario en este ma-nuscrito dada la libertad ortograacutefica de la autora Como se puede observar en la mayor parte de las veces no es el caso

176 JUAN FRANCISCO MAURA

Ay que me abraso Ay que me quemo del Amor deJesus nasareno como no tocan y tantildeen a fuego

Responde Jesus Hija mia tus simples vozes oygo y aunque resuenan bien a mis oidos pero te deseo mas mansa y pasifica en tus fervores ya sabes que no siempre as de vivir en mantillas ni a los pechos de tu Madre por que es rason que padescas con espiritu fuerte como mu-jer valerosa por que a una esposa del Rey soberano y prinsipe de la paz no le estan bien chiquerias ni fervores de nintildea malcriada y ya es ora que la destete su Madre la Naturaleza y que empesando su nueva vida camine con el favor de mi grasia sigiendo mis passos de eterna vida esto con sus pies descalssos segun mis leyes de Amor puro y desinteresado lo tienen ordenado153 y vivir en paz como lo deje en-cargado a mis apostoles Santos repitiendoles varias vezes Vivir en pas y caridad esto es un vivir en Dios y Dios en el Alma y asi hija mia el Alma que vive en paz vive en mi Como mis cortesanos en el cielo y pues me pides que te ensentildee a vivir segun las leyes de mi condision Repito el desir que te debes mostrar sufrida en todo tiempo y estado sin permitir en tu corason que ni aun los fervores se adelanten con estremos ni ademanes sino atiende y aprende de mi purisima Madre pues siempre la veras si bien lo consideras que mientras vivio en el mundo en todos sus trabajos se mostro firme fuerte costante como piedra diamante Pues mirandome nintildeo entre sus brasos desnudo en el pesebre desnudo y crusificado en los brassos de una cruz En estos y otros passos no se mudo su rostro sino que en suma serenidad y pasifico corason toda se sacrificaba enteramente en los brassos de mi Amor y rendido su corason y voluntad en la de mi eterno Padre por ejemplo te la doy y deseo que aprendas de sus nobles calidades pues te aseguro carisima que las leyes de mi condision y pura verdad todo lo allaras enserrado en el corason de mi purisima Madre sedle fiel y descansaras en paz

+

Quartillas a un alma que padese soledad interior

1Un Alma afligida y tristese ve en un campo desiertay en el su esposo la tieneAtormentada y sedienta

153 Es a traveacutes de estas liacuteneas lo que hace suponer que la autora de este diaacutelogo amoroso entre el Alma y Je-suacutes es novicia esto es laquoque estaacute empesando su nueva vidaraquo En las mismas liacuteneas una vez maacutes se hace alusioacuten al laquodesteteraquo de su vida civil laquoa una esposa del Rey soberano y principe de la paz no le estan bien chiquerias ni fervores de nintildea malcriada y ya es ora que la destete su Madre la naturalesaraquo (fol 5)

177ESPANtildeOLAS DE ULTRAMAR EN LA HISTORIA Y EN LA LITERATURA

2Pendiente se ve en el AyreSolo un hilo la sustentasin tocar el pie en el sueloporque del no tome tierra

3Mirandola esta yto a ytoaquel sol que la atraviesay la enviste con sus rayosmas ella no pestantildeea

4Como sigarra padese y como a tal se atormentabatiendo sus mismas Alasy el corason se atraviesa

5Con penas sustos temoresquando se mira assi mesmasin tener valor en nadaporque es la misma flaquesa

6Pero el Amor de su esposotoda su atension le llevay la pone en un abismopero cubierto en tiniebla

7Desea dar algun bueloy subir con ligeresapero se mira travadacon una fuerte cadena

8Clama suspira y padeseMas del todo se sujetaRindiendo su voluntadA la divina clemencia

9Los enemigos del AlmaCruelmente le asen guerray ella aunque firme y constantelos reselos la atormentan

178 JUAN FRANCISCO MAURA

10de todos modos padeseaunque gosa la asistensiadel divino esposo amadoque en su interior se recrea

11Solo de verla penary con verla tan serenadise resibe mil gustosde su sigarra pequentildea

12Le sabe el mundo a mil yelesy su trato le atormentaviendo en el mil falsedadesque todas saben a tierra

13Para poderse librardeja de correr y buelacon las Alas del Amory el mismo Amor se la lleva

Una vida dedicada a un amor divino un amor que le haraacute llenar un buen nuacutemero de cuartillas dedicadas a tan alta empresa Se desconoce si la vocacioacuten de Sor Nada con-tinuoacute con tanta intensidad el resto de sus diacuteas Ciertamente la vida en el covento no era faacutecil En algunos casos la experiencia era traumaacutetica incluso fatal para algunas de las adolescentes de la Ameacuterica Espantildeola Las reglas del claustro eran severas por varias razones Estas joacutevenes si no teniacutean el permiso de la superiora no podiacutean recibir visitas no podiacutean volver a sus casas su correspondencia era censuraba y no podiacutean salir del periacutemetro conventual Igualmente se levantaban antes del amanecer para oir misa tra-bajaban el resto del diacutea y lo maacutes interesante es que muchas veces esta vida era aceptada por muchas

Page 26: Tercera parte: Mujeres en la vida intelectual - …parnaseo.uv.es/Editorial/Maura/TerceraParte.pdf · La Biblia, por su parte, hace repetidas menciones de la mujer y sobre el comporta-

156 JUAN FRANCISCO MAURA

Entristece ver coacutemo se manejan las cifras de estas mujeres como si de ganado o de bienes suntuarios se tratase Por otra parte existieron irregularidades como la de pobla-doras espantildeolas que vivieron amancebadas con hombres que ya estaban casados en la peniacutensula Normalmente esto ocurriacutea cuando la estancia del conquistador se prolonga-ba maacutes de lo debido en lugares donde habiacutea pocas espantildeolas Muchas veces nacieron hijos de estas uniones que hicieron auacuten maacutes difiacutecil la situacioacuten para las mujeres que esperaban en Espantildea a un marido que ya no teniacutea ningunas intenciones de volver En los juicios de residencia los documentos acostumbran a citar estos casos ya que era parte de su obligacioacuten castigar las irregularidades extramatrimoniales y salvaguardar las buenas costumbres familiares que con tanto intereacutes se deseaba mantener laquoUn ejemplo nos lo da la isla de Cuba donde en 1532 viven con hombres casados Olalla Hernaacuten-dez Santillana Aranda lsquola Cordobesarsquo Catalina de Leoacuten Catalina Saacutenchez Francisca Hernaacutendez Mayor de Azebedo Juana de Valeros y lsquouna mujer que estaba en casa de Ayalarsquoraquo (Borges 416)

Estos casos no fueron aislados y mucho menos en Cuba centro neuraacutelgico de todo el movimiento de ida y vuelta entre la metroacutepoli y el Nuevo Mundo Estas ocho acusa-ciones por lo tanto no tienen porqueacute considerarse extraordinarias y menos en el lugar maacutes cosmopolita de las Indias en esos momentos al que llegaban flotas a cada momen-to Al parecer existieron casos parecidos en el Riacuteo de la Plata Peruacute y Nueva Espantildea (Ratcliffe 347) El margen legal para que estas mujeres viviesen como quisiesen estuvo limitado por una moral que veiacutea uacutenicamente en el matrimonio o el convento una salida laquovaacutelidaraquo para que fueran aceptadas socialmente Los hombres en iguales circunstan-cias fueron juzgados por una laquomoralraquo mucho maacutes permisiva

La mujer y el cuerpo eclesiaacutestico

Pues iquestquieacuten diablos os traiacutedo aquiacute dijo don Quijote siendo hombre de la iglesia iquestQuieacuten sentildeor replicoacute el caiacutedo laquomi desventuraraquo Pues otra mayor os amenaza dijo don Quijote sino me satisfaceacuteis a todo cuanto primero os pregunteacute (Cervantes Don Quijote )

Otro factor a tener en cuenta en un anaacutelisis sobre la presencia de la mujer en el Nuevo Mundo es el que tiene que ver con la institucioacuten maacutes importante de las que llegaron desde Europa la iglesia catoacutelica Sin aacutenimo de criticar a tan compleja institucioacuten res-ponsable de gran parte de los aconteceres en el Nuevo Mundo vale la pena analizar algunas singularidades Muchos de sus miembros fueron grandes ejemplos de valor e inteligencia a la hora de tratar los maacutes variados y escabrosos asuntos con los que se encontraron los cristianos en la otra orilla durante este periacuteodo Se debe resaltar tam-

157ESPANtildeOLAS DE ULTRAMAR EN LA HISTORIA Y EN LA LITERATURA

bieacuten su caraacutecter medieval en la manera de hacer apostolado y de entender y tratar a los potenciales cristianos Si se tienen en cuenta los privilegios y prerrogativas que algunas de las altas jerarquiacuteas eclesiaacutesticas tuvieron no seriacutea superfluo estimar que un respeta-ble porcentaje de la poblacioacuten de origen laquodudosoraquo muy bien podiacutea venir de la misma iglesia Fueron muchas las viacutectimas y muchas las familias divididas por un padre laquoinvi-sibleraquo Gran parte de los hijos o laquosobrinosraquo de estos sacerdotes pasaron a ocupar cargos similares incluyendo los privilegios que estos cargos llevaban consigo como si se trata-se de cualquier otro oficio gremial transmitido generacionalmente regla tan comuacuten en la Europa medieval Todaviacutea a finales del siglo XIII en Espantildea los derechos de los hijos y nietos de los sacerdotes estaban protegidos por la ley sin que hubiesen podido ser erradicados por las reformas gregorianas (Ratcliffe 347)139

Las letras espantildeolas ya se haciacutean eco de estos lances amorosos entre representantes de la Iglesia y ciertas damas del lugar desde los tiempos del poeta riojano Gonzalo de Berceo En su obra maacutes conocida Los milagros de Nuestra Sentildeora Berceo describe con un realismo ingenuo y sencillo relatos de humor y de humanismo sobre aquellos hombres de carne y hueso que eran perdonados por la intercesioacuten de la Virgen Mariacutea Juan Ruiz por su lado haraacute de su Libro de buen amor la obra maacutes representativa en este sentido Seriacutea prolijo recordar la actuacioacuten de la Iglesia durante diversos periacuteodos de la Edad Media no soacutelo en Espantildea sino en toda Europa En la Espantildea musulmana del siglo XII concretamente en Sevilla el comportamiento de los representantes de la iglesia cristia-na (mozaacuterabe) en territorio islaacutemico es duramente criticado por el sevillano Ibn Abdun Este precioso documento muestra el estricto control y falta de confianza que existiacutea sobre la mujer prohibieacutendolas que entrasen en las laquoabominablesraquo iglesias cristianas

porque los cleacuterigos [cristianos] son libertinos fornicadores y sodomi-tas Asimismo debe prohibirse a las mujeres francas que entren en la iglesia maacutes que en diacuteas de funcioacuten o fiesta porque alliacute comen beben y fornican con los cleacuterigos y no hay uno de ellos que no tenga dos o maacutes de estas mujeres con que acostarse Han tomado esta costumbre por haber declarado iliacutecito lo liacutecito y viceversa Convendriacutea pues mandar a los cleacuterigos que se casasen como ocurre en Oriente y que si quie-ren lo hagan (Leacutevi-Provenccedilal 150)

Pese a existir una convivencia paciacutefica durante gran parte de la Edad Media entre los tres credos monoteiacutestas de Espantildea (cristianos musulmanes y judiacuteos) esto no suponiacutea que no existiese desprecio y desconfianza entre estos grupos religiosos Dice Abdun resaltando el peligro que suponiacutea que una mujer entrase en casa de un cleacuterigo cristiano de vida ceacutelibe

No debe tolerarse que haya mujer sea vieja o no en casa de un cleacuterigo mientras eacuteste rehuacutese casarse Obliacutegueseles ademaacutes a circuncidarse co-mo les obligoacute al-Mutadid pues si a lo que dicen siguen el ejemplo de Jesuacutes (iexclDios les bendiga y salve) Jesuacutes se circuncidoacute y precisamente ellos que han abandonado esta praacutectica tienen una fiesta que celebran solemnemente el diacutea de su circuncisioacuten (Leacutevi-Provenccedilal 150-151)

139 Valdriacutea la pena ver si han cambiado mucho las cosas desde hace quinientos antildeos a esta parte o si in-cluso la iglesia moderna ha retrocedido en tolerancia en cuanto a las relaciones sexuales de los representantes de la Iglesia

158 JUAN FRANCISCO MAURA

El historiador argentino Germaacuten Arciniegas recoge un pasaje ilustrativo de lo men-cionado anteriormente pero trasladado al ambiente de la colonia diciendo que incluso en poblaciones pequentildeas como Santa Fe con poco maacutes de un convento y una ermita la fragilidad de la carne enredaba a frailes soldados y virreyes por igual laquoEl buen So-liacutes que murioacute en olor de santidad con la cabeza reclinada sobre un par de ladrillos y en saya de franciscano cruzaba en las noches el solar de su palacio para ir a besar a la Marichuelaraquo (118-19)

Arciniegas recoge tambieacuten un suceso aparecido en el diario de Lima en 1667 que no tuvo que ser extraordinario durante los primeros antildeos de la colonia laquoEl fraile carmelita mdashGrande hereje y siendo sacerdote deciacutea misa gran perro lujurioso deshonesto que relatando sus maldades dijo que en cierta ciudad habiacutea conocido carnalmente a maacutes de trescientas y sesenta mujeres y en un convento de monjas habiacutea cometido muchos sacrilegios Este lo trujeron preso de Buenos Aires por Chileraquo (119)

Las controversias de la iglesia moderna sobre las relaciones que los eclesiaacutesticos de-ben tener con el sexo femenino parece que no han encontrado todaviacutea respuesta Sigue existiendo miedo y recelo a que la mujer comparta no soacutelo poder en la jerarquiacutea de la iglesiacutea sino en la vida privada de los miembros de la institucioacuten En la Nueva Espantildea el primer obispo de Meacutexico Juan de Zumaacuterraga viendo en la mujer un ser de tentacioacuten irresistible prohibioacute terminantemente la presencia de eacutestas en su casa Ni siquiera para su limpieza y aseo El franciscano Juan de Torquemada se refiere a este comportamien-to como una de las virtudes del popular obispo

Fue este benditiacutesimo prelado muy amigo de la virtud y de virtuosos y aceacuterrimo reprehendedor de vicios y viciosos y tan enemigo de la ociosidad que no permitiriacutea que alguno de su casa estuviese ocioso fue amiciacutesimo de la limpieza por lo cual jamaacutes consintioacute que mujer alguna entrase en su casa aunque fuese necesaria al servicio de ella ni nunca consintioacute que por alguna ocasioacuten subiese mujer a lo alto y aposentos de ella antes lo teniacutea todo cerrado como un monasterio porque sabiacutea (como quien tambieacuten sabiacutea) que la ocasioacuten suele derribar los maacutes fuertes y robustos corazones (450 lib 20 cap 31)

No fueron uacutenicamente miembros de la iglesia catoacutelica los que valoraron la lucha con-tra la tentacioacuten siguiendo al pie de la letra el crudeliacutesimo refraacuten laquoentre santa y santo pared de cal y cantoraquo Se tienen algunas noticias de la vida social de los primeros tiem-pos de la colonia En estos documentos se puede observar coacutemo no distaban mucho las oacuterdenes que se dictaban en la metroacutepoli y las que se llevaban a cabo en la Nueva Espantildea La vida social tanto de damas como de algunos miembros de la iglesia de las colonias era maacutes laquorelajadaraquo de lo que las normas permitiacutean Gracias a la informacioacuten ofrecida por Manuel Romero de Terreros disponemos de los nombres de las primeras virreinas

Las esposas de los primeros cinco Virreyes Don Antonio de Mendoza Don Luis de Velasco Don Gastoacuten de Peralta Don Martiacuten Enriacutequez de Almanza y Don Lorenzo Suaacuterez de Mendoza Conde de la Coruntildea fueron respectivamente Dontildea Caterina de Vargas Dontildea Ana de Cas-tilla y Mendoza hija de Don Diego de Castilla Sentildeor de Gor y Caba-

159ESPANtildeOLAS DE ULTRAMAR EN LA HISTORIA Y EN LA LITERATURA

llerizo de Carlos V Dontildea Leonor de Vieo Dontildea Mariacutea Manrique hija del Marqueacutes de Aguilar y Dontildea Catalina de la Cerda hija del segundo Duque de Medinaceli (Romero 2)

Existen noticias concretas de la seacuteptima virreina de la Nueva Espantildea (1586) dontildea Blanca de Velasco marquesa de Villamanrique En ellas destaca lo anteriormente men-cionado sobre la falta de tolerancia existente en aquellos tiempos difiacutecilmente com-prensible si no fuera por fragmentos esporaacutedicos conservados sobre la vida colonial en la Nueva Espantildea En la siguiente Relacioacuten hecha por autores anoacutenimos sobre la visita que hizo Fray Alonso Ponce Comisario General de la Orden Seraacutefica a las provincias de la Nueva Espantildea se mencionan las eneacutergicas medidas que con los miembros de su orden en su opinioacuten de moral laquomuy relajadaraquo tomoacute este religioso Tambieacuten aparecen mencionadas sus relaciones con la Virreina

Captoacutese ademaacutes la enemistad del gobernante y de la Virreina Dontildea Blanca de Velasco hija del cuarto Conde de Nieva sentildeora seguacuten pare-ce de conducta ligera y caraacutecter maacutes que dominante laquoPor este mismo tiempo (septiembre de 1586) fueron el Virey y la Vireyna a holgarse y recrearse en la cibdad de Xochimilco Posoacute con toda su casa dentro de nuestro convento en un dormitorio deacutel y detuacutevose alliacute siete u ocho diacuteas en que los indios les hicieron grandes fiestas aunque les costaron caras porque en una dellas murieron dos o tres dellos con un tiro que se disparoacute y reventoacute y al principal indio de aquella cibdad hirieron muy malraquo (Romero 3-4)

A pesar del riacutegido control eclesiaacutestico y civil que habiacutea en la Nueva Espantildea existieron tambieacuten pareacutentesis en los que incluso miembros de la iglesia y mujeres mdashhumanos al fin y al cabomdash pudieron disfrutar de algunos momentos de regocijo y alegriacutea Con-tinuando con la cita anterior el mismo autor se queja del laquoexcesoraquo de libertad en los frailes que se suponiacutea que teniacutean que profesar una extremada pobreza y no digamos castidad En primer lugar se describen pormenorizadamente la abundancia en el tipo y cantidad de comida de toda clase dulces y vino que se consumieron con largueza y generosidad durante aquellas fiestas Pero lo que maacutes indigna al autor (o autores) fue que llegasen a entrar mujeres en el convento

y aunque todo esto es malo delante de Dios y delante de los hom-bres lo que maacutes mal parecioacute y de que todo el mundo tuvo que mur-murar fueacute la demasiada libertad rotura y disolucioacuten que hubo en en-trar y estar muy de propoacutesito mujeres no soacutelo la Vireyna y las suyas sino otras muchas dentro del dicho convento y andar por las celdas como si fuese cosa profana y como si no hubiera breve apostoacutelico que soacute graves penas y censuras prohibe estas entradas y como si a los frai-les no los comprendiera el dicho breve por admitirlas y no estuviera asiacute declarado y mandado por nuestros estatutos generales de Toledo (Romero 4-5)

La preocupacioacuten por las laquotentaciones de la carneraquo fuera del matrimonio siempre es-tuvo en la mente de los religiosos espantildeoles asiacute como de otras nacionalidades y reli-

160 JUAN FRANCISCO MAURA

giones que intentaban vanamente erradicar algo tan intriacutenseco al ser humano como a cualquier otra especie animal Esta preocupacioacuten se acentuoacute mucho maacutes en el Nuevo Mundo donde muchas sociedades tribales no veiacutean a la mujer como parte integrante de su propiedad privada La razoacuten es obviamente socioloacutegica y ha existido desde el principio de los tiempos en las civilizaciones maacutes primitivas laquoNo desearaacutes a la mujer del proacutejimoraquo El quebrantar este precepto equivaldriacutea a desestabilizar desde su base a la sociedad judeo-cristiana fundamentada en la familia Las penas aplicadas en estas transgresiones seraacuten lo suficientemente severas como para marginar socialmente mdashen el mejor de los casosmdash a aquellos que las pongan en praacutectica Siendo la mujer la encar-gada por la naturaleza de trasmitir la descendencia de la especie su libertad sexual se veraacute limitada por el peligro de quedar embarazada cada vez que ignore tal elemental precepto140

Primeras escritoras del Nuevo Mundo

Contra cuerdos y contra locos estaacute obligado cualquier caballero andante a volver por la honra de las mujeres cualesquiera que sean Cuanto maacutes por las reinas de tan alta guisa y pro como fue la reina Madaacutesima a quien yo tengo particular aficioacuten por sus buenas partes porque fuera de haber sido fermosa ademaacutes fue muy prudente y muy sufrida en sus calamidades que las tuvo muchas (Cervantes Don Quijote)

Fueron varias las escritoras que durante los siglos XVI y XVII tuvieron una relacioacuten di-recta o indirecta con el Nuevo Mundo Muchas de ellas eligieron la vida monaacutestica mdashen algunos casos como refugio huyendo de sus maridosmdash uacutenica salida en una estructura social en donde no eran muchas las opciones especialmente en una eacutepoca donde el fac-tor religioso pesaba casi tanto como el econoacutemico pero sobre todo para dedicarse a una vida espiritual difiacutecilmente alcanzable en otras circunstancias Mariloacute Vigil apunta que las monjas que lo eran por su propia voluntad ademaacutes de tener inquietudes religiosas tambieacuten las teniacutean intelectuales como es el caso de la escritora miacutestica espantildeola Santa Teresa de Jesuacutes (1515-1582) que ademaacutes de tener una de las vidas maacutes interesantes que se conozcan supo sacar tiempo para escribir las maacutes bellas manifestaciones de la poesiacutea liacuterica y sobre todo de la prosa castellana (Vigil 237-38) Cada una de estas mujeres de-dicadas a la vida literaria y espiritual de su tiempo se merece muchiacutesimo maacutes espacio del que se les pueda ofrecer en estas pocas liacuteneas No obstante con estas pasajeras men-

140 Aunque afortunadamente las cosas han cambiado para la mujer no se debe dejar de mencionar la can-tidad de abusos sexuales de la que es viacutectima en la sociedad moderna

161ESPANtildeOLAS DE ULTRAMAR EN LA HISTORIA Y EN LA LITERATURA

ciones se espera al menos incluirlas y poder despertar el suficiente intereacutes para que sus vidas y sus obras no sigan sumergidas en las simas del olvido Para que estas mujeres de la iglesia pudiesen satisfacer su curiosidad cognoscitiva era necesario romper todas aquellas barreras que supusiesen un estorbo o una restriccioacuten a la hora de investigar consultar o hablar con cualquier persona religiosa de cualquier orden o secular ya fue-se obispo o cleacuterigo Las posiciones intelectuales entre las diferentes oacuterdenes religiosas fueron muy dispares como bien es sabido No eran iguales los planteamientos teoloacute-gicos de los dominicos que los de los franciscanos o los de los carmelitas que los de los agustinos o jesuitas Era necesario por lo tanto tener acceso a estas fuentes de informa-cioacuten para poder constrastar las diferencias y hacer valoraciones propias (Vigil 237-38) El escritor espantildeol Caro Baroja destaca el caraacutecter enciclopeacutedico del catolicismo donde se han integrado corrientes y posturas muy dispares que a traveacutes del diaacutelogo daban cierto espacio al creyente con maacutes curiosidad intelectual para que este pudiese compa-rar y valorar las diferentes opciones que se le ofreciacutean (Vigil 237-38)

Varias de estas mujeres intelectuales fueron hijas de conquistadores que aunque na-cidas en suelo americano seguiacutean expresaacutendose en la lengua de sus padres con no me-nos fuerza que sus contemporaacuteneas peninsulares Es cierto que existieron numerosas escritoras en el Nuevo Mundo durante el siglo XVIII algunas dedicadas incluso al estudio de las matemaacuteticas como la mexicana Dontildea Francisca Gonzaga y Castillo Pero para limitar el presente trabajo a los siglos XVI y XVII uacutenicamente se incluiraacuten ejemplos de estos dos siglos

La peruana Josefa de Alarcoacuten publicoacute en 1648 unas liras dedicadas a las Exequias del Priacutencipe Baltasar Carlos

Cifro en capilla breveEl tribunal de la Magestad maacutes graveEn fe de lo que debeA Carlos que en dos mundos no cabe141

El caso de Sor Jeroacutenima de la Asuncioacuten es muy interesante una mujer que tuvo la oportunidad de viajar a Meacutexico y posteriormente a las Filipinas para cumplir con las mi-siones que le habiacutean sido encomendadas por su orden Nacida en Toledo en 1555 en el seno de una noble y acaudalada familia estuvo destinada a recorrer el mundo ofrecien-do sus servicios a todos los necesitados distinguieacutendose por su ardiente caridad laquovien-do que los galeotes eran tratados con dureza excesiva sobre todo cuando los llevaban de un pueblo a otro procuroacute aliviar las penas de aquellos desgraciados y lo consiguioacute en parteraquo (Serrano y Sanz 268 65) Hija del licenciado e ilustre jurista Pedro Garciacutea Yaacute-ntildeez y de dontildea Catalina de la Fuente ingresoacute contra su voluntad en el monasterio de las Clarisas de Santa Isabel de los Reyes (Toledo) el 5 de agosto de 1570 (Trevintildeo 46) hay que decir que eacutesta no seraacute la uacutenica voluntad contra la que tuvo que luchar

Sor Jeroacutenima se embarcoacute para Meacutexico y de alliacute partioacute hacia Manila junto con siete compantildeeras en el famoso laquoGaleoacuten de Manilaraquo que saliacutea anualmente del puerto mexi-cano de Acapulco Su viaje a las Filipinas duroacute un antildeo y tres meses desde su salida de Espantildea tiempo en el que demostroacute un gran valor y determinacioacuten por el soacutelo hecho de

141 Manuel Serrano y Sanz Apuntes para una biblioteca de escritoras espantildeolas desde el antildeo 1401 al 1833 vols 268 269 270 271 Biblioteca de Autores Espantildeoles (Madrid Atlas 1975) 268 19

162 JUAN FRANCISCO MAURA

embarcarse en tan precarias naves Fue la primera misionera de Oceaniacutea muriendo en Manila en 1621 Alliacute fundoacute el monasterio de Santa Clara que perviviriacutea hasta ser bom-bardeado en la Segunda Guerra Mundial (Trevintildeo 47) Escribioacute su Vida donde trata de la fundacioacuten del convento y de todas las tribulaciones mdashllegoacute a ser excomulgadamdash y satisfacciones que una vida dedicada a una causa justa proporciona Tambieacuten escribioacute una obra de caraacutecter filosoacutefico-teoloacutegico titulada Carta de marear en el mar del mundo nombre alegoacuterico que da cuenta de la enorme distancia recorrida a traveacutes del laquomar del espiacuterituraquo por sor Jeroacutenima He aquiacute algunos de sus versos de caraacutecter religioso

Vuestra soy para vos naciacuteiquestQueacute mandaacuteis hacer de miacute Inaccesible grandezaEterna Sabiduriacuteay bondad del alma miacuteaDios un ser poder y Altezamirad la suma pobrezade eacutesta que se ofrece aquiacuteiquestQueacute mandaacuteis hacer de miacute (Serrano y Sanz 268 66)

Ya en Meacutexico tenemos otro ejemplo de una mujer dedicada por completo a Dios y al estudio y composicioacuten de obras de caraacutecter teoloacutegico Dontildea Ana Mariacutea del Costa-do de Cristo nacida en la ciudad de Tlaxcala hacia el antildeo 1650 Tomoacute la orden de San Francisco para consagrarse a las labores de su orden y a la escritura Se dice que con los escritos de Dontildea Ana Mariacutea se podriacutean formar veinte tomos (Serrano y Sanz 268 282) Estas son algunas de sus obras Vida y muerte de Jesucristo Nuestro Sentildeor Vida del Seraacutefico Padre San Francisco de Asiacutes Vida de la iacutenclita Virgen Santa Clara Vida del sutiliacutesimo doctor Juan Duns Escoto

Pero no todas las monjas tuvieron vidas tan dedicadas al estudio y la oracioacuten Loacutegica-mente entre un nuacutemero tan grande de mujeres existioacute de todo y seriacutea un error pensar que todos los conventos femeninos estaban integrados por laquocaacutendidas palomasraquo Una monja en el siglo XVI y XVII teniacutea mucha maacutes fuerza que una mujer ordinaria ya que actuaban en grupo y la entrada a los recintos donde viviacutean estaba permitida solo a mu-jeres Esta situacioacuten las haciacutea mucho maacutes fuertes a todos los niveles que una mujer sola protegida uacutenicamente por su familia laquoLas monjas durante los siglos XVI y XVII lucharon por eludir la clausura y por zafarse del control que los frailes de las secciones masculi-nas de sus congregaciones ejerciacutean sobre ellasraquo (Vigil 230) Soacutelo un antildeo maacutes tarde que dontildea Ana Mariacutea del Costado de Cristo en 1651 y a 12 leguas de Meacutexico nacioacute la sin par Sor Juana Ineacutes de la Cruz hija de don Pedro Manuel de Asbaje natural de Vergara (Vizcaya) y de Dontildea Isabel Ramiacuterez de Santillana hija de espantildeoles (Serrano y Sanz 268 289) Por ser sin lugar a dudas la poeta maacutes importante de su tiempo y probable-mente la maacutes conocida del mundo hispano no profundizaremos en ella Su obra es un canto a la inteligencia y el exponente maacutes destacado de la literatura barroca americana tanto en prosa como en verso Destacareacute simplemente que Sor Juana Ineacutes pese a vivir en un sociedad donde no eran excesivas las libertades concedidas a las mujeres tuvo el caraacutecter y la determinacioacuten de dejarnos las maacutes bellas poesiacuteas amorosas que si bien estuvieron enmarcadas en un ambiente religioso como era de esperar por su condicioacuten

163ESPANtildeOLAS DE ULTRAMAR EN LA HISTORIA Y EN LA LITERATURA

pudieron transcender como unas de las maacutes bellas manifestaciones literarias que hoy en diacutea se conservan Fue su agudeza mental sensibilidad y cultura tal que no fueron suficientes los soacutelidos muros del convento para contener el genio de tan extraordinaria mujer Recordemos sus conocidiacutesimos versos en defensa de las mujeres

Hombres necios que acusaacuteisa la mujer sin razoacutensin ver que sois la ocasioacutende lo mismo que culpaacuteis142

Las metaacuteforas y la delicadeza que emplea en rebatir a su obispo en su laquoRespuesta a sor Filotea de la Cruzraquo no son solamente el epiacutetome del feminismo de su tiempo sino una de las maacutes brillantes manifestaciones del barroco hispano Poesiacutea teatro ensayo y un conocimiento extraordinario de las ciencias claacutesicas de su tiempo hacen de esta mujer un ejemplo extraordinario de las letras universales Ya son cientos los artiacuteculos y libros que se han escrito sobre Sor Juana y no dejan de aparecer tesis doctorales sobre los maacutes diversos temas conectados con la citada autora143 Como nos dice Stephanie Merrim en su documentada obra Early Modern Womenrsquos Writing and Sor Juana Ineacutes de la Cruz

She wrote and published on secular themes as atypical for a nun as human love Her remarkably extensive writings essayed and reenacted most of the (male) poetic dramatic theological and even philosophi-cal discourses of her times in the metropolis making her works a com-pendium of baroque culture in its diversity and syncretism Sor Juana self-creation as a learned women effectively toppled many of the walls in which she was materially enclosed and positioned her within the dynamic world of early modern European culture (xii)

No se debe dejar de mencionar a otras escritoras novohispanas de la eacutepoca que aun-que no fueron tan proliacuteficas y relevantes como Juana Ineacutes de la Cruz dejaron testimo-nio de algunos acontecimientos que tienen intereacutes socioloacutegico o testimonial Este es el caso de Dontildea Mariacutea Estrada Medinilla de igual nombre y apellido que la mujer que acompantildeoacute a las tropas de Corteacutes en su primera entrada a Meacutexico Natural de Meacutexico publicoacute toda su obra a mediados del siglo XVII concentraacutendose principalmente en la lle-gada del Marqueacutes de Villena virrey y capitaacuten general de la Nueva Espantildea a la ciudad de Meacutexico en el antildeo 1640 Escrita en octavas reales la obra trata de las fiestas de toros y cantildeas con que se obsequioacute al citado virrey Fue impresa en Meacutexico en 1641 (Serrano y Sanz 269 402)

Mucho maacutes importante para el presente libro es Dontildea Isabel de Guevara que escribioacute en 1556 la carta en que se expone la ayuda que ofrecieron las mujeres en el descubri-miento y conquista del Riacuteo de la Plata No cabe la menor duda de que esta carta es uno

142 Para una mejor comprensioacuten del caraacutecter de esta excepcional mujer veacutease entre los numeros trabajos publicados Fredo Arias de la Canal Intento de psicoanaacutelisis de Juana Ineacutes y otros ensayos sorjuanistas (Meacutexico Frente de Afirmacioacuten Hispanista 1972) 47

143 Veacuteanse entre otros trabajos Octavio Paz Sor Juana Ineacutes de la Cruz o las trampas de la fe Georgina Sabat de Rivers En busca de Sor Juana Margo Glantz Sor Juana la comparacioacuten y la hipeacuterbole Gerard C Flynn Sor Juana Ineacutes de la Cruz Stephanie Merrim Feminist perspectives on Sor Juana Ineacutes de la Cruz Pamela Kirk Sor Juana Ineacutes de la Cruz religion art and feminism

164 JUAN FRANCISCO MAURA

de los documentos maacutes importantes con que contamos en relacioacuten a la aportacioacuten fe-menina en el proceso de la conquista de Ameacuterica Su importancia viene dada por varios factores Primero es uno de los primeros testimonios mdashsi no el primeromdash en donde se expone abiertamente la indispensable colaboracioacuten de las mujeres en el descubrimien-to y conquista de tierras en el Nuevo Mundo laquoQue si no fuera por ellas todos fueran acabadosraquo En segundo lugar la informacioacuten vertida en estas liacuteneas presenta en parte la manera de pensar de una mujer espantildeola en tales circunstancias Extraordinario tes-timonio de primera mano que nos da una idea de lo que significoacute en muchos casos el valor y entrega constantes de muchas de estas mujeres que auacuten a riesgo de perder sus vidas no dudaron en luchar al lado de los hombres por una causa que consideraban laquocomuacutenraquo

La relevancia histoacuterica de dicha carta hace que merezca ser transcrita en su totali-dad

Carta de dontildea Isabel de Guevara a la princesa gobernadora dontildea Juana exponiendo los trabajos hechos en el descubrimiento y conquista del Riacuteo de la Plata por las mujeres para ayudar a los hombres y pidiendo repartimiento

para su marido Asuncioacuten 2 de julio de 1556

Muy alta y muy poderosa sentildeora

A esta provincia del Riacuteo de la Plata con el primer gobernador de ella don Pedro de Mendoza hemos venido ciertas mujeres entre las cuales ha querido mi ventura que fuese yo la una y como la armada llegase al puerto de Buenos Aires con mil quinientos hombres y les faltase el bastimento fue tamantildea el hambre que a cabo de tres meses murie-ran los mil esta hambre fue tamantildea que ni la de Jerusalem se le puede igualar ni con otra ninguna se puede comparar Vinieron los hombres en tanta flaqueza que todos los trabajos cargaban de las pobres mu-jeres asiacute en lavarles las ropas como en curarles hacerles de comer lo poco que teniacutean limpiarlos hacer centinela rondar los fuegos armar las ballestas cuando algunas veces los indios les veniacutean a dar guerra hasta cometer a poner fuego en los versos y a levantar los soldados los que estaban para ello dar arma por el campo a voces sargentean-do y poniendo en orden los soldados porque en este tiempo como las mujeres nos sustentamos con poca comida no habiacuteamos caiacutedo en tanta flaqueza como los hombres Bien creeraacute V A que fue tanta la so-licitud que tuvieron que si no fuera por ellas todos fueran acabados y si no fuera por la honra de los hombres muchas maacutes cosas escribiera con verdad y los diera a ellos por testigos Esta relacioacuten bien creo que la escribiraacuten a V A maacutes largamente y por eso cesareacute Pasada esta tan peligrosa turbunada determinaron subir el riacuteo arriba asiacute flacos como estaban y en entrada de invierno en dos bergantines los pocos que quedaron vivos y las fatigadas mujeres los curaban y los miraban y les guisaban la comida trayendo la lentildea a cuestas fuera del naviacuteo y animaacutendolos con palabras varoniles que no se dejasen morir que presto dariacutean en tierra de comida metieacutendolos a cuestas en los

165ESPANtildeOLAS DE ULTRAMAR EN LA HISTORIA Y EN LA LITERATURA

bergantines con tanto amor como si fueran sus propios hijos Y como llegamos a una generacioacuten de indios que se llaman tinbues sentildeores de mucho pescado de nuevo los serviacuteamos en buscarles diversos modos de guisados porque no les diese en rostro el pescado a causa de que lo comiacutean sin pan y estaban muy flacos Despueacutes determinaron subir el Paranaacute arriba en demanda de bastimento en el cual viaje pasaron tanto trabajo las desdichadas mujeres milagrosamente quiso Dios que viviesen por ver que en ellas estaba la vida de ellos porque todos los servicios del naviacuteo los tomaban ellas tan a pechos que se teniacutea por afrentada la que menos haciacutea que otra sirviendo de marear la vela y gobernar el naviacuteo y sondar de proa y tomar el remo al soldado que no podiacutea bogar y escotar144 el naviacuteo y poniendo por delante a los soldados que no se desanimasen que para los hombres eran los trabajos verdad es que a estas cosas ellas no eran apremiadas ni las haciacutean de obliga-cioacuten ni las obligaba si solamente la caridad Asiacute llegaron a esta ciudad de la Asuncioacuten que aunque ahora estaacute muy feacutertil de bastimentos en-tonces estaba de ellos muy necesitada que fue necesario que las muje-res volviesen de nuevo a sus trabajos haciendo rosas con sus propias manos rosando y carpiendo y sembrando y recogiendo el bastimento sin ayuda de nadie hasta tanto que los soldados guarecieron de sus fla-quezas y comenzaron a sentildeorear la tierra y adquirir indios e indias de su servicio hasta ponerse en el estado en que ahora estaacute la tierra He querido escribir y traer a la memoria de V A para hacerle saber la ingratitud que conmigo se ha usado en esta tierra porque al presente se repartioacute por la mayor parte de los que hay en ella asiacute de los anti-guos como de los modernos sin que de miacute y de mis trabajos se tuviese ninguna memoria y me dejaron de fuera sin me dar indio ni ninguacuten geacutenero de servicio Mucho me quisiera hallar libre para me ir a presen-tar delante de VA con los servicios que a SM he hecho y los agravios que ahora se me hacen mas no estaacute en mi mano porque estoy casada con un caballero de Sevilla que se llama Pedro de Esquivel que por servir a SM ha sido causa que mis trabajos quedasen tan olvidados y se me renovasen de nuevo porque tres veces le saqueacute el cuchillo de la garganta como allaacute VA sabraacute A que suplico mande me sea dado mi repartimiento perpetuo y en gratificacioacuten de mis servicios [en el origi-nal del AHN Diversos doc 141 dice ademaacutes mande que sea proveydo mi marido de alguacuten cargo conforme a la calidad de su persona pues el de su parte por sus servicios lo merece] lo merece Nuestro sentildeor acre-ciente su Real vida y estado por muy largos antildeos De esta ciudad de la Asuncioacuten y de julio 2 1556 antildeosServidora de V A que sus Reales manos besa

Dontildea Isabel Guevara

144 Sacar agua de un riacuteo acequia o presa

166 JUAN FRANCISCO MAURA

Sobremdash A la muy alta y muy poderosa sentildeora Princesa dontildea Joana Gobernadora de los reinos de Espantildea etc ndash En su Consejo de Indias (Isabel de Guevara 619-21)

Iroacutenicamente la carta teniacutea que llegar a manos de la desdichada heredera del trono de Castilla e hija de los Reyes Catoacutelicos Juana laquola Locaraquo que habiacutea muerto el antildeo an-terior Son profeacuteticas las palabras de esta mujer no soacutelo porque sus hechos personales quedasen en el olvido sino porque incluso se ha borrado la historia de las mujeres en el Nuevo Mundo negando su presencia Por lo menos Isabel Guevara tuvo acceso a una pluma iquestCuaacutentas seriacutean las que ni siquiera sabriacutean escribir

Otra contemporaacutenea fue dontildea Leonor de Iciz que vivioacute durante la segunda mitad del siglo XVI Interesa sobre todo por los sonetos que escribioacute en elogio de Ercilla soldado que participoacute en la conquista de Chile y que se inmortalizoacute con su obra La Araucana (Serrano y Sanz 269 534) Lo mismo hizo Dontildea Bernarda Lintildeaacuten en 1610 autora de otro soneto en memoria del capitaacuten Gaspar Peacuterez de Villagraacute que participoacute en la conquista de Nuevo Meacutexico (Serrano y Sanz 270 14) Los escritos de estas mujeres tratan de de dos de las eacutepicas maacutes dramaacuteticas de la conquista

En el Peruacute y en pleno siglo XVII aparece otra fundadora de conventos Sor Bernardina de Jesuacutes que ademaacutes fue comparada con Santa Teresa por la semejanza de sus laquocartasraquo con las de la santa de Avila Fue fundadora del convento de Tacunga en Quito maacutes tarde destruiacutedo por un terremoto Dice Serrano y Sanz con respecto a su biografiacutea un tanto legendaria que fue carmelita descalza de Lima y hermana de Dontildea Mariacutea Benavides y Esquivel abuela de D Pedro de Peralta Barnuevo (Serrano y Sanz 269 553) Dicen que esta santa se alimentoacute durante treinta antildeos con laquochochos y caacutescaras de naranja hecho tan raro como increiacuteble Cuando fallecioacute reparaban las monjas en ponerle una vara de azucenas porque habiacutea sido casada y aquellas flores aparecieron milagrosamente sobre el cadaacuteverraquo (Serrano y Sanz 269 553)

Otra limentildea del primer cuarto del siglo XVII con reputacioacuten de santa fue Dontildea Luisa Melgarejo En este caso no se trata de una religiosa de oficio sino de la mujer del doctor Juan de Soto La uacutenica diferencia es que dontildea Luisa al parecer teniacutea laquovisiones y reve-lacionesraquo lo que debioacute poner nervioso a maacutes de un miembro del tribunal del laquoSanto Oficioraquo que consideraron sus escritos laquoculpadosraquo De su papel de laquosantaraquo pasa por lo tanto al de laquoposesaraquo o laquoendemoniadaraquo El inquisidor de Lima Gaitaacuten escribioacute un infor-me donde a traveacutes de la opinioacuten puacuteblica y de otras averiguaciones se deciacutea que dontildea Luisa Melgarejo laquomujer santaraquo sabiacutea cuando las almas de los difuntos saliacutean del Purga-torio El diacutea 14 de noviembre de 1623 se decidioacute tomar posesioacuten de todos los cuadernos en los que habiacutea escrito las experiencias de todos sus laquoarrobos suspensiones extasis y revelacionesraquo Estos cuadernos una vez recogidos presentaron toda una serie de al-teraciones borrones adiciones enmiendas incluso diferente letra por lo que despueacutes de haber sido examinados resultaron culpables145 Excelente imaginacioacuten debioacute tener dontildea Luisa Melgarejo la suficiente al parecer para convencer a algunos miembros de la iglesia de que en sus escritos laquohabiacutea algoraquo que mereciacutea la pena Estas cosas ocurriacutean en Lima uno de los centros culturales maacutes importantes de la vida social y poliacutetica en la Ameacuterica espantildeola Lima a comienzos del siglo XVII seguacuten el empadronamiento llevado

145 Serrano y Sanz 270 47 Veacutease J T Medina Historia del tribunal del Santo Oficio de la Inquisicioacuten de Lima (1569-1820) (Santiago Imprenta Gutemberg 1887) Tomo II 34-41

167ESPANtildeOLAS DE ULTRAMAR EN LA HISTORIA Y EN LA LITERATURA

a cabo en 1614 por el marqueacutes de Montesclaros era una ciudad de 25000 habitantes de los que 11000 eran espantildeoles El nuacutemero de religiosos y religiosas llegaba a 1720 (Pittaluga 77)

Se sabe que en la Isla de Santo Domingo durante el siglo XVI nacioacute o al menos resi-dioacute una poeta de ceacutelebre apellido en los aconteceres del Nuevo Mundo Dontildea Elvira de Mendoza de la que se conserva un manuscrito en la Real Academia de la Historia laquoCantares miacuteos que estaacuteis rebeladosraquo Eugenio de Salazar hace un elogio de ella como poeta en un Soneto a la ilustre Poeta y Sentildeora Dontildea Elvira de Mendoza moradora en la ciudad de Santo Domingo (Serrano y Sanz 270 53)

Nacida en Burgos sobre el antildeo 1590 dontildea Luisa de Padilla merece un lugar aparte dentro del grupo de mujeres escritoras de su eacutepoca Por su estilo faacutecil y castizo su no-vedad de pensamientos y su rica erudicioacuten recibioacute el siguiente comentario de Manuel Serrano y Sanz laquoPocas figuras hay en nuestra historia literaria femenil que puedan compararse a esta eminente prosista acaso la maacutes notable de cuantas florecieron en Es-pantildea durante el siglo XVIIraquo (Serrano y Sanz 270 95-96) Este comentario y comparacioacuten deberiacutea ampliarse para que tambieacuten incluyese a laquola historia literaria varonilraquo

Dontildea Luisa fue defensora de la labor que la Inquisicioacuten estaba realizando en la laquolim-piezaraquo de mujeres laquosoldados del demonioraquo que existieron en algunas provincias espa-ntildeolas en aquel tiempo Muchas de las mujeres que combinaban la magia con los po-deres curativos fueron condenadas no solamente por hombres de la Inquisicioacuten sino tambieacuten por mujeres de todas las clases sociales como es el caso de Luisa de Padilla condesa de Aranda En su obra Elogios de la verdad e invectiva contra la mentira preveniacutea contra aquellos que practicaban artes en contra de la religioacuten cristiana La magiacutea negra seguacuten Padilla era la causante de que muriesen casi tantas personas como otras causas naturales habieacutendose descubierto hasta seis mil brujas en Vizcaya y Guipuzcua con-fesando una mujer de un pueblo pequentildeo haber matado con su laquomagiaraquo a ochocientas personas (Perry 31) Eran estos laquomales de ojoraquo y maldiciones seguacuten la autora las causas de que se secasen los pechos de las madres lactantes que se separasen las parejas casa-das y que abortasen las embarazadas (Perry 31)

Si se tiene en cuenta que dontildea Luisa estuvo emparentada con la maacutes rancia aristocra-cia de su tiempo o lo que es lo mismo con algunos de aquellos que en cierta manera dirigiacutean los destinos de Espantildea en aquella eacutepoca (Duques de Lerma Duque de Uceda Marqueacutes de Cueacutellar Conde de Santa Gadea Marqueacutes de Belmonte por citar algunos) se comprenderaacute mejor su identificacioacuten con una institucioacuten que en teoriacutea velaba por la salvaguarda de los valores laquoeternosraquo de una Espantildea destinada a ser la campeona del ca-tolicismo durante los siglos XVI y XVII El padre de dontildea Luisa fue don Martiacuten de Padilla y Manrique extraordinario militar que proboacute su valor contra enemigos moriscos ingle-ses holandeses piratas berberiscos y el renegado genoveacutes Muley Faxad Fue veterano de la batalla de Lepanto donde apresoacute a cuatro galeras y acompantildeoacute con su escuadra a la reina Dontildea Margarita de Austria cuando vino de Geacutenova en 1598 laquoHabiacutea obtenido a 24 de julio de 1587 el tiacutetulo de Conde de Santa Gadea y en 1596 el de Capitaacuten General de la Armada del mar Oceacuteanoraquo (Serrano y Sanz 27095-96)

Por otra parte tambieacuten se sabe que dontildea Luisa participoacute directamente y desde tem-prana edad en la praacutectica de algunas actividades intelectuales como la historia y la arqueologiacutea a la vez que dedicaba su tiempo a virtudes cristianas como la caridad y el socorro de los necesitados (Serrano y Sanz 270 97) Resulta mucho maacutes faacutecil compren-

168 JUAN FRANCISCO MAURA

der la postura ideoloacutegica de esta gran mujer si tienen en cuenta ademaacutes de los factores antes mencionados otros tantos de caraacutecter biograacutefico concernientes a su educacioacuten y matrimonio

Otra escritora fue la mexicana dontildea Mariacutea Casilda Pozo natural de Temestla (Meacutexi-co) Nacida en el mes de abril de 1682 dejoacute escrita su biografiacutea en 16 cuadernos el ma-nuscrito original se encuentra en la biblioteca del colegio de San Gregorio de Meacutexico Fue su confesor el jesuiacuteta Domingo Quiroga que fue quieacuten la incitoacute a escribir su obra (Serrano y Sanz 270 137) Sor Juana de San Antonio aparece a principios del siglo XVII formando parte de un grupo de religiosas espantildeolas que fueron a Manila por la ruta de Meacutexico Ademaacutes de distinguirse por sus cualidades personales su obra interesa por ofrecer informacioacuten testimonial y costumbrista acerca de la forma de vestir de chinos y japoneses (Serrano y Sanz 270 225)

Otra monja esta vez ecuatoriana fue Gertrudis de San Ildefonso Nacida en 1652 profesoacute su vocacioacuten en el convento de Santa Cruz de Quito dejando escrita su vida por mandato de su confesor el padre Martiacuten de la Cruz el cual hizo una biografiacutea laquoen tres gruesos voluacutemenesraquo Gertrudis de San Ildefonso murioacute en 1709 (Serrano y Sanz 270 300) en olor de santidad

Sor Mariacutea Ana Agueda de San Ignacio nacioacute el 3 de marzo de 1695 en la dioacutecesis de la puebla de los Angeles en un rancho del lugar de Santiago Tecaliacute (Serrano y Sanz 270300) Esta monja mexicana escribioacute varias obras durante su vida conventual a lo largo de la cual desempentildeoacute el cargo de priora por muchos antildeos Entre sus obras todas de caraacutecter piacuteo y de laquoamor divinoraquo escribioacute un curioso y laquocopiosoraquo tratado de la Leche virginal de la Soberana Madre de Dios El padre Fr Juan de Villa Saacutenchez hace el siguiente comentario al respecto laquoen que hablando primero en sentido natural de los beneficios que debemos a Nuestra Sentildeora pasa a tratar en sentido miacutestico y alegoacuterico enten-diendo en la leche la doctrinaraquo (Serrano y Sanz 270301) Mexicana fue tambieacuten Sor Petronila de San Joseacute que ejercioacute como abadesa del Real monasterio de Jesuacutes Mariacutea de la ciudad de Meacutexico Escribioacute Vidas de varias religiosas ejemplares obra que tiene su im-portancia ya que al parecer laquoDe esta obra se sirvioacute D Carlos de Siguumlenza y Goacutengora para escribir su Parayso Occidental (Meacutexico 1684) seguacuten eacutel mismo declara en el proacutelogo diciendo lsquoa quien si hay algo bueno en esta historia se le debe todorsquoraquo (Serrano y Sanz 270 354) Menos conocida fue su compatriota Sor Luisa de Santa Catalina natural de Xacona laquopueblo situado en las inmediaciones de Zamora (Meacutexico)raquo siendo bautizada en 1682 Escribioacute Cartas espirituales a su confesor el P Juan Loacutepez de Aguado (Serrano y Sanz 270 361-62)146

Todos estos escritos la mayoriacutea de ellos ignorados por el gran puacuteblico tienen la im-portancia de darnos una perspectiva diferente En otras palabras ensentildearnos la maacutes refinada sensibilidad de muchas mujeres que permanecieron y en su mayoriacutea siguen permaneciendo a laquooscurasraquo de una eacutepoca tan rica de la literatura espantildeola como fue el Siglo de Oro Este siglo fue tambieacuten en su dimensioacuten literaria y artiacutestica patrimonio de la mujer

146 Para profundizar en muchas de estas escritoras hispano-americanas la consulta de la Biblioteca Hispano-Americana de Beristain de Souza resulta de capital importancia

169ESPANtildeOLAS DE ULTRAMAR EN LA HISTORIA Y EN LA LITERATURA

Sor Nada ardores divinos de una monja adolescente escritos ineacutedi-tos de una recieacuten profesa del siglo XVI147

iexclQueacute encantadores son tus amores hermana miacutea espo-sa iexclQueacute deliciosos son tus amores maacutes que el vino Y el aroma de tus perfumes es mejor que el de los baacutelsamos Miel virgen destilan tus labios esposa miel y leche hay en tu lengua y el perfume de tus vestidos es como aroma de incienso (Cantar de los Cantares 4 10-11)

Sor Nada llamada asiacute por humildad seguacuten dice el Indice de manuscritos de la Biblio-teca Nacional de Madrid es uno de los ejemplos maacutes desconocidos e interesantes que tenemos de la poesiacutea y prosa amoroso-religiosa del siglo XVII Hasta la fecha nunca se habiacutea publicado su obra e incluso hasta el antildeo 1995 para mi sorpresa no habiacutea copias microfilmadas de sus manuscritos en la Biblioteca Nacional Serrano y Sanz en su libro Apuntes para una Biblioteca de Escritoras Espantildeolas hace una escueta y pasajera mencioacuten de esta mujer y de su obra (68-69) siendo eso todo lo que hasta ahora se sabiacutea de ella Sus escritos consisten en los siguientes manuscritos

1 laquoEn queacute consiste un verdadero amor de Diosraquo 9 hojas uacutetiles en 4ordm letra del siglo XVII Biblioteca Nacional de Espantildea Manuscrito 1295926

2 laquoPintura del Propio Amorraquo laquoPintura del propio Amorraquo 10 hojas uacutetiles en 4ordm letra del siglo XVII Biblioteca Nacional de Espantildea Manuscrito 1295927

3 laquoEsplicacioacuten sobre en queacute consiste la paz del Almaraquo laquoQuartillas aacute un Alma que padece soledad interiorraquo 7 hojas uacutetiles en 4ordm letra del siglo XVII Biblioteca Nacio-nal de Espantildea Manuscrito 1295828

En cuanto a su persona soacutelo se nos dice que laquose encubrioacute con este seudoacutenimo laquoSor Nadaraquo Esta monja desconocida de origen hispanoamericano posee toda la frescura e ingenuidad de una joven apasionada metida por vocacioacuten u obligacioacuten a ejercer la profesioacuten maacutes comuacuten para mujeres de cierta clase social de su tiempo En sus liacuteneas podemos encontrar un misticismo simple incluso en algunos momentos infantil pero a su vez lleno de una fuerza y sensualidad interior poco comuacuten en escritos de este geacute-nero que desborda los liacutemites del laquoamor divinoraquo a traveacutes de los diaacutelogos entre el Alma y el Esposo Sor Nada consigue proyectar su amor a Dios maacutes allaacute de una experiencia romaacutentica Su experiencia es sincera y genuinamente miacutestica trascendiendo la imita-cioacuten o la propia creacioacuten poeacutetica ficcionalizada (Hatzfeld 30) Algunos pasajes son de un

147 Veacutease mi artiacuteculo Sor Nada ardores divinos de una monja adolescente escritos ineacuteditos de una monja profesa del siglo XVIIraquo Espeacuteculo Revista de estudios literarios 26 (2004) 1-10 Universidad Complutense de Madrid http wwwucmesinfoespeculonumero26sornadahtml

170 JUAN FRANCISCO MAURA

alto contenido eroacutetico con sustantivos y metaacuteforas que recuerdan la maacutes iacutentima unioacuten amorosa en unos casos y el tierno amor maternal en otros

[T]e miro Jesus mio desnudo a las inclemencias del tiempo y ardien-do en puro fuego de Amor por la salud de las Almas y me ensentildeas a que te ame con todo mi corason y puresa de espiritu No atendiendo ni buscando umanos intereses ni a solisitar consuelos ni regalos espi-rituales que suelen empantildear la puresa del noble corason No mi Jesus amable pues antes me ensentildeaste tu puro Amor que desnudo sean [sic] de encaminar mis passos desde el pesebre asta la cuna en donde te miro tan desnudo como el pesebre y todo Sentildeor por mi Amor (Mss 12959 26 hoja 1 v)

El manuscrito (12959 27) de la mencionada serie de tres contiene algunas correccio-nes quizaacute hechas por el confesor o quizaacute por ella misma cuando se dirige con excesiva familiaridad y arrebatado fervor a su Amado148 He escogido el manuscrito (12959 Caja 28) en primer lugar por ser el ejemplo maacutes representativo de su poesiacutea y prosa En este manuscrito encontramos de forma maacutes directa que alegoacuterica toda la frescura de un diaacutelogo entre Jesuacutes y el alma que raya como diriacutea Cervantes laquoa la llana y sin rodeosraquo (667 lib 2 cap 38) con el doloroso y a veces desesperado deseo de la entrega y la unioacuten final con el Amado La ortografiacutea no ha sido corregida respetaacutendose el texto ori-ginal149 Veamos el siguiente fragmento

Mira que te amo con Amor de padre y con Amor de esposo el mas fino y puro enamorado que no tan solo me presio de darte mi mano sino tambien todo mi cuerpo y sangre para que con mi pan de vida te sustentes y te regales a tus anchuras y que con mi propio espiritu vivas en paz como tu lo deseas y que mis amores sean unico alivio en tus trabajos en esta mortal vida pues si esto es asi y sabes que muero por darte vida dime esposa mia de que te fatigas Dame querida tus bras-sos y dime si me amas como yo te amo (Hoja 4)

148 La antologiacutea de Promis ha procurado insertar entre los textos antoloacutegicos algunos que se refieren a la es-critura de mujeres fundamentalmente de aquellos generados en el interior de los espacios conventuales Estos textos se fundan como laquohistorias de vidasraquo y responden casi siempre a los requerimientos de los confesores de las monjas coloniales En este sentido resulta valiosiacutesima la incorporacioacuten de la llamada Relacioacuten autobiograacute-fica de Sor Ursula Suaacuterez como una muestra significativa de la escritura monjil entendida en esta eacutepoca (como tambieacuten en la tradicioacuten europea medieval) inserta en las denominadas laquolabores de manoraquo de las religiosas ya que el texto escrito por mandato se convertiacutea en una suerte de entramado o tejido linguumliacutestico es decir en un nuevo bordado que la mayor parte de las veces el confesor convertido en censor iba haciendo tachando y enmendando En la antologiacutea Promis agrega un texto de Sor Tadea Garciacutea de la Huerta titulado Relacioacuten de la inundacioacuten que hizo el riacuteo Mapocho de la ciudad de Santiago de Chile en el monasterio de Carmelitas titular de San Rafael el diacutea 16 de junio de 1783 se trata de un poema tipo romance escrito en versos octosilaacutebicos y que da cuenta de lo sucedido ese diacutea en el convento (Resentildea de la literatura del reino de Chile de Joseacute Promis Eddie Morales Pintildea httpwwwupaclpublicaciones2002literatura_promishtm)

149 Son frecuentes las faltas ortograacuteficas Una de ellas es el uso constante del seseo La ausencia de acentua-cioacuten y puntuacioacuten exceptuando alguacuten punto o coma arbitrario no seguido casi nunca de mayuacutescula inicial lo mismo que el uso igualmente aribitrario de la h o de b v r q g j m n x etc No olvidemos de la misma forma la laxitud linguumliacutestica existente en el siglo XVII (no sabemos a queacute parte de eacuteste pertenece el manuscrito) asiacute como la joven edad de la monja

171ESPANtildeOLAS DE ULTRAMAR EN LA HISTORIA Y EN LA LITERATURA

Los versos del presente manuscrito poseen la misma fuerza que tiene su prosa Con una estructura estroacutefica indefinida estaacuten aparentemente corregidos por alguien que tu-vo la oportunidad de conocer personalmente a la autora Muy probablemente se trate del padre al que hace referencia al principio del primer manuscrito laquoMandame el Pd que le declare en que consiste un verdadero amor a Diosraquo a continuacioacuten continuacutea con su caracteriacutestica humildad laquo[O]bedesere y dire lo q Dios me inspire segun mi rudesa y simplisidadraquo (Mss 12959 26) En cuanto a la fuerza pasional de esta joven observamos con cierta tristeza coacutemo aparece sublimada en sus escritos con toda la enegiacutea de una joven mujer llena de intensidad y vida pero encerrada en los liacutemites de un convento Veamos un ejemplo en donde responde el Alma en los siguientes versos

O mi enamorado Jesus O mi dulse y tierno amanteO alegria de los sielos O dulse Jesus amable

(Toda Sentildeor me derrito toda Sentildeor me desagoy quiero vivir por ti ea sentildeor abrasadme) [Tachado en el original]

Toda Sentildeor me derrito toda Sentildeor me desagoy quiero morir por vos ea Sentildeor que ya acabo

Ya tus amores me llaman ya tus perfumes me traencon suspiros y agonias Sentildeor hasta que te alcanse

O mi Jesus amoroso no puedo mas dilatarmeya la pasiensia me falta dulse Jesus abrasadme

(No puedo vivir sin vos no puedo mas dilatarmeya la pasiensia me falta dulse) [Tachado en el original]

No puedo vivir sin vos mi dulse Jesus amablepues me teneis echisada siendo mi esposo y mi Padre

Ay que me abraso Ay que me quemo del Amor deJesus nasareno como no tocan y tantildeen a fuego150

Estos versos llenos de arrebato sublimado conectan con toda la tradicioacuten miacutestica es-pantildeola que se remonta a Ramoacuten Llul y que culmina en el maacutes universal de nuestros

150 En toda la fuerza y simbologiacutea del amor maacutes iacutentimo del maacutes alto y sublime placer de la unioacuten de los amantes tal como lo encontramos en el Cantar de los Cantares y en San Juan de la Cruz Leemos en la Biblia

Ya me he quitado la tuacutenica iquestCoacutemo volver a vestirme Ya me he lavado los pies iquestCoacutemo volver a ensuciarlosMi amado metioacute su mano por el agujero (de la llave) y mis entrantildeas se estremecieron por eacutel Me levanteacute para abrir a mi amado Mis manos destilaron mirra y mis dedos mirra exquisita en el pestillo de la cerradura (5 3-5)

Nos ocurre lo mismo con San Juan de la Cruz en su insuperable poema laquoLlama de amor vivaraquo

iexclOh cauterio suaveiexclOh regalada llagaiexclOh mano blanda iexclOh toque delicadoque a vida eterna sabey toda deuda pagaMatando muerte en vida la has trocado

172 JUAN FRANCISCO MAURA

miacutesticos San Juan de la Cruz Esta tradicioacuten se extiende hasta finales del siglo XVII esto es hasta los finales del Barroco siendo un poco maacutes tardiacuteo en la Ameacuterica espantildeola Sin tener como propoacutesito discutir en el presente trabajo a queacute corriente miacutestica pertenece la obra de Sor Nada es necesario resaltar no obstante el hecho de que estaacute escrito por una mujer y ademaacutes de tierna edad El manuscrito 12959 Caja 26 termina con estas pa-labras laquo[T]odas estas boverias escrivi por entretenimiento siendo resien profesa en la religion Sor Nadaraquo Mas no por la juventud de su autora los escritos dejan de tener lo-gradas metaacuteforas imaacutegenes y siacutembolos sacados de la naturaleza La alegoriacutea de la unioacuten matrimonial poseeacute el fuego liacuterico de la maacutes apasionada de las relaciones amorosas vivi-ficada por perfumes flores insectos animales escarchas nieves o abrojos Por lo tanto aunque la narracioacuten destile cierta ingenuidad no carece por ello de un vocabulario rico con el sabor popular de la poesiacutea de los cancioneros y romances de tradicioacuten renacen-tista No ha sido otra mi intencioacuten que la de rescatar del olvido unos escritos en prosa y en verso llenos de frescura y espontaneidad que nos muestran la pasioacuten con que la joven novicia se laquoentrega en cuerpo y almaraquo a los menesteres de su profesioacuten guiada por un padre espiritual en esos primeros antildeos de formacioacuten Esta ha sido la razoacuten por la que presento a continuacioacuten el citado manuscrito en su totalidad

Sor Nada (Mss 1295928)

laquoEsplicacion sobre en que consiste la paz del AlmaraquolaquoQuartillas a un Alma que padece soledad interiorraquo

[7 hojas utiles en 4ordm letra del siglo XVII]

+

Esplicacion sobre en que consiste la paz del Alma

Pareseme segun mi rudo entender que la verdadera paz del Alma con-siste en una muy pura y buena consiencia en un corason liso y bien intensionado en una verdadera rectitud de espiritu en el qual el Alma procura bolar a Dios sin jamas detenerse a respetos umanos ni reparar en que me diran ni de que me censuraran sino me apresuro a seguir a unos entenderes y pareseres dorados en los quales pretende el mundo engantildear y ensuciar si se puede la puresa de un corason unicamente de Dios y de su Santa ley y se lo conserva cristalino con la divina asis-tencia de la gracia y comprendido de su Amor y temor siguiendo la luz divina de tan amante Sentildeor Dios y ombre verdadero con que este ilustrado corason ni se altera ni se mueve por los disfrasses dorados que ase el mundo y sus moradores mayormente con falssas amistades aunque con ellos muestre buena intension Con la misma grasia y luz de Dios conose el buen corason estos disfrasses que le ase el mundo y se retira de todo con espiritu y valor esto sin la menor alterasion sino que en suma paz se retira a buscar a Dios dentro de su mismo corason

173ESPANtildeOLAS DE ULTRAMAR EN LA HISTORIA Y EN LA LITERATURA

y se abrasa con su pura verdad en la qual se le descubren mil interio-res secretos tan solidos puros y verdaderos que la misma Alma queda abismada y de puro grandes no los puede bien comprender ni esplicar pero estos mismos secretos divinos le sirven de espuelas para no solo correr sino bolar con pies de plumas en seguimiento de su bien ama-do Jesus y como este soberano Sentildeor es tan amante de sus espossas las Almas luego que la ve bolar con pies de plumas la sale al encuen-tro en despoblado campo que se deve de llamar Campo de Amor de Dios y el mismo Sentildeor se viene a las manos por ser Dios que nos ama con Amor infinito de Padre benigno y amoroso con que asiendose en contra deso este divino enamorado en lo interyor de el Alma que le busca con ansias de servirle y amarle y en aquella soledad traban una conversasion amorosa y sensilla como la pluma simple de quien esto escrive

Divino enquentroDios y el Alma en la soledad

O Soberano Principe de la paz dise el Alma tus perfumes me traen a ti bolando porque alla en el mundo y sus valedores me pretendian engantildear y entretenerme con pegaminossas amistades que facilmen-te me pudieran envenenar y matarme apartandome de ti Mi dulse Jesus amable mi Redentor Soberano que con tantas ansias me sales al enquentro como siervo [ciervo] erido de mis Amores los quales tu Amor me ofrese para que con tu mismo Amor te ame y te sirva en paz sin perturbarme ni contristarme ni cansarme de padeser pasando si se ofrese por escarchas nieves espinas ni abrojos ni por otros diverssos trabajos ni piedras de contradision que tu me puedes permitir pues por mas que el mar se levante con sus ferosses olas contra mi ni piedras se me tiren al rostro en todo Sentildeor me quieres con serenidad pasifica sin la menor perturbasion Todo Sentildeor quieres que lo tome con Serenidad de espiritu y asi vengo a ti bolando para que mejor me ensentildees a vivir segun las leyes de tu noble condision que me son muy agradables por mas que el mundo me las despresie por segir sus vanidades y torsidas intensiones con apariensias de bien y con este engantildeo y bien me quie-ro mas a mi que no a mi proximo veo que segun mi pareser se pierden muchas Almas y tambien de aquellos que se depresian y pasan por muy espirituales Con que me paresen pocos los que llegan a padeser con desnudes151 de espiritu por tu purisimo Amor y me parese essas se quedan muy atrasadas en la virtud por el peligro de bolver muy atras el paso de modo que se pueden despentildear y pereser en su misma desgra-sia ya por soberbia o por otras enfermedades que se les pega al corason y asi lo pasan como siegos ignorantes sin advertir en sus peligros

151 La letra en cursiva es miacutea

174 JUAN FRANCISCO MAURA

este aquerdo Sentildeor y otros que tu verdad me ensentildea me ase venir uyendo de las paredes del mundo y me vengo a ti Dios mio bolando con las dos Alas del Amor y temor que tu mismo Amor me ofrese tan de gracia y tan de grado que no se duentildeo mio con que lo responder a tan soberano beneficio y finesa de tus entrantildeas de Amorvengo Sentildeor y esposo mio unicamente a descansar en ti pues los peli-gros del camino me an puesto en mucho sobresalto temiendo el per-derte y sin ti perderme para siempre por una eternidad sin fin pues deseo amado mio ganarme ganandote a ti y vivir en ti aora en vida y despues eternamente y estos cuidados me traen fatigada molida y cansada y no podre tener alivio y descanso sino viendome entre tus brassos aunque sea estando en cruz pues ese es el fin de mis deseos vivir y morir en ti ablame mi cordero manso y ensentildeame a que ver-daderamente te ame como fiel esposa ea mi caro amigo dame la ma-no pues sabes Amor mio que en mi no ay mano sin tu misma mano y asi mi Dios y Sentildeor mi Principe Soberano con umilde rendimiento y deseos de alcansarte te suplico me des la mano y me consueles en estos mis trabajos Deseo Sentildeor vivir en paz y los malos amores de mi Naturaleza flaca no me dejan detentar y no quieren por mi desgrasia atropellar con las leyes de tu Amor ni quisiera perturbar mi corason quando me veo con un torvellino de olas y contratiempos que a menu-do me suelen sercar pero si tu Sentildeor me das la mano nada temo sino que me aseguro y vivire en paz sin que me fatiguen los contratiempos pues mi mano en la tuya y mi espiritu en el tuyo por mas borrascas que me envistan no seran bastantes para rendir mi voluntad a la suya bien si para pronunsiar un fiat que resuene bien atras en tus oidos y que en medio de mis fatigas me ponga a cantar tus divinas misericor-dias hea Sentildeor ya pretendo serrar mis labios por no desir mas bove-rias y deseo Sentildeor oir tus palabras de vida eterna abla Sentildeor que tu sierva oye con atension y cuydado mira mi Dios que se me ase tarde y espero con prisa deseando saborearme y aprovecharme de los ecos de tu Santa dotrina pues todas tus palabras saben a eterna vida callen pues mis sentidos y potensias y todo se ponga en paz pues mi dulse y soberano Sentildeor no se escusara de ablar me aun que en mudo silensio hea mi gran Prinsipe de la paz ablame que tus puros amores me traen perdida por estos asperos montes y mis cortos pasos no te pueden dar alcanse mirame mi Dios a tus pies postrada como un vil gusano y me-nor ormiga de la tierraabla Jesus y dise a su esposa el Alma querida esposa mia que me pides y por que te muestras tan fatigada y mal sufrida no vives como corde-rita del campo buscando de mis pechos el sustancial pasto mi Amor no te sustenta y mi grasia te promete eterna vida pues dime amada de que te fatigas y te muestras mal sufrida mira que te amo con Amor de padre y con Amor de esposo el mas fino y puro enamorado que no tan solo me presio de darte mi mano sino tambien todo mi cuerpo y

175ESPANtildeOLAS DE ULTRAMAR EN LA HISTORIA Y EN LA LITERATURA

sangre para que con mi pan de vida te sustentes y te regales a tus an-churas y que con mi propio espiritu vivas en paz como tu lo deseas y que mis amores sean unico alivio en tus trabajos en esta mortal vida pues si esto es asi y sabes que muero por darte vida dime esposa mia de que te fatigas Dame querida tus brassos y dime si me amas como yo te amoResponde el Alma152 Tu mi Dios sabes si yo te amo pues de mi solo se que mis deseos y ansias buelan a ti mas no alcanso a saber si te amo como tu de-seas ser amado y como desconfio tanto de mi y de mis prosederes falssos temo Dios mio perderme y perderte y asi Sentildeor pues no desechas mis Amores y te muestras tan fino en amarme te pido me ensentildees a vivir segun las leyes de tu pura verdad y fina condisionhija mia dise Dios la prueva de un verdadero Amor consiste en sufrir callar y padeser por mi unico Amor y en todo seguir mis pasos sin ja-mas retroseder por mas fragoso que se muestre el camino pues nunca seran tantas las espinas las escarchas ni las nieves ni los vientos bo-rrascosos que te se ofrescan pasar por mi Amor como los que mi tierno y desinteresado Amor paso por ti y siempre con mis pies descalssos y asi hija y esposa mia muestrate costante en seguir lo perfecto de mis passos pues mi braso fuerte sera en ti y peleara por ti y te sera el todo en tus nesesidades y mi Amor te convertira en dulse y suave lo amargo y molesto a la condision de la carrne

Responde el Alma

O mi enamorado Jesus O mi dulse y tierno amanteO alegria de los sielos O dulse Jesus amable

(Toda Sentildeor me derrito toda Sentildeor me desagoy quiero vivir por ti ea sentildeor abrasadme) [Tachado en el original]

Toda Sentildeor me derrito toda Sentildeor me desagoy quiero morir por vos ea Sentildeor que ya acabo

Ya tus amores me llaman ya tus perfumes me traencon suspiros y agonias Sentildeor asta que te alcanse

O mi Jesus amoroso no puedo mas dilatarmeya la pasiensia me falta dulse Jesus abrasadme

(No puedo vivir sin vos no puedo mas dilatarmeya la pasiensia me falta dulse) [Tachado en el original]

No puedo vivir sin vos mi dulse Jesus amablepues me teneis echisada siendo mi esposo y mi Padre

152 La aparicioacuten de una mayuacutescula al principio de una oracioacuten es algo totalmente arbitrario en este ma-nuscrito dada la libertad ortograacutefica de la autora Como se puede observar en la mayor parte de las veces no es el caso

176 JUAN FRANCISCO MAURA

Ay que me abraso Ay que me quemo del Amor deJesus nasareno como no tocan y tantildeen a fuego

Responde Jesus Hija mia tus simples vozes oygo y aunque resuenan bien a mis oidos pero te deseo mas mansa y pasifica en tus fervores ya sabes que no siempre as de vivir en mantillas ni a los pechos de tu Madre por que es rason que padescas con espiritu fuerte como mu-jer valerosa por que a una esposa del Rey soberano y prinsipe de la paz no le estan bien chiquerias ni fervores de nintildea malcriada y ya es ora que la destete su Madre la Naturaleza y que empesando su nueva vida camine con el favor de mi grasia sigiendo mis passos de eterna vida esto con sus pies descalssos segun mis leyes de Amor puro y desinteresado lo tienen ordenado153 y vivir en paz como lo deje en-cargado a mis apostoles Santos repitiendoles varias vezes Vivir en pas y caridad esto es un vivir en Dios y Dios en el Alma y asi hija mia el Alma que vive en paz vive en mi Como mis cortesanos en el cielo y pues me pides que te ensentildee a vivir segun las leyes de mi condision Repito el desir que te debes mostrar sufrida en todo tiempo y estado sin permitir en tu corason que ni aun los fervores se adelanten con estremos ni ademanes sino atiende y aprende de mi purisima Madre pues siempre la veras si bien lo consideras que mientras vivio en el mundo en todos sus trabajos se mostro firme fuerte costante como piedra diamante Pues mirandome nintildeo entre sus brasos desnudo en el pesebre desnudo y crusificado en los brassos de una cruz En estos y otros passos no se mudo su rostro sino que en suma serenidad y pasifico corason toda se sacrificaba enteramente en los brassos de mi Amor y rendido su corason y voluntad en la de mi eterno Padre por ejemplo te la doy y deseo que aprendas de sus nobles calidades pues te aseguro carisima que las leyes de mi condision y pura verdad todo lo allaras enserrado en el corason de mi purisima Madre sedle fiel y descansaras en paz

+

Quartillas a un alma que padese soledad interior

1Un Alma afligida y tristese ve en un campo desiertay en el su esposo la tieneAtormentada y sedienta

153 Es a traveacutes de estas liacuteneas lo que hace suponer que la autora de este diaacutelogo amoroso entre el Alma y Je-suacutes es novicia esto es laquoque estaacute empesando su nueva vidaraquo En las mismas liacuteneas una vez maacutes se hace alusioacuten al laquodesteteraquo de su vida civil laquoa una esposa del Rey soberano y principe de la paz no le estan bien chiquerias ni fervores de nintildea malcriada y ya es ora que la destete su Madre la naturalesaraquo (fol 5)

177ESPANtildeOLAS DE ULTRAMAR EN LA HISTORIA Y EN LA LITERATURA

2Pendiente se ve en el AyreSolo un hilo la sustentasin tocar el pie en el sueloporque del no tome tierra

3Mirandola esta yto a ytoaquel sol que la atraviesay la enviste con sus rayosmas ella no pestantildeea

4Como sigarra padese y como a tal se atormentabatiendo sus mismas Alasy el corason se atraviesa

5Con penas sustos temoresquando se mira assi mesmasin tener valor en nadaporque es la misma flaquesa

6Pero el Amor de su esposotoda su atension le llevay la pone en un abismopero cubierto en tiniebla

7Desea dar algun bueloy subir con ligeresapero se mira travadacon una fuerte cadena

8Clama suspira y padeseMas del todo se sujetaRindiendo su voluntadA la divina clemencia

9Los enemigos del AlmaCruelmente le asen guerray ella aunque firme y constantelos reselos la atormentan

178 JUAN FRANCISCO MAURA

10de todos modos padeseaunque gosa la asistensiadel divino esposo amadoque en su interior se recrea

11Solo de verla penary con verla tan serenadise resibe mil gustosde su sigarra pequentildea

12Le sabe el mundo a mil yelesy su trato le atormentaviendo en el mil falsedadesque todas saben a tierra

13Para poderse librardeja de correr y buelacon las Alas del Amory el mismo Amor se la lleva

Una vida dedicada a un amor divino un amor que le haraacute llenar un buen nuacutemero de cuartillas dedicadas a tan alta empresa Se desconoce si la vocacioacuten de Sor Nada con-tinuoacute con tanta intensidad el resto de sus diacuteas Ciertamente la vida en el covento no era faacutecil En algunos casos la experiencia era traumaacutetica incluso fatal para algunas de las adolescentes de la Ameacuterica Espantildeola Las reglas del claustro eran severas por varias razones Estas joacutevenes si no teniacutean el permiso de la superiora no podiacutean recibir visitas no podiacutean volver a sus casas su correspondencia era censuraba y no podiacutean salir del periacutemetro conventual Igualmente se levantaban antes del amanecer para oir misa tra-bajaban el resto del diacutea y lo maacutes interesante es que muchas veces esta vida era aceptada por muchas

Page 27: Tercera parte: Mujeres en la vida intelectual - …parnaseo.uv.es/Editorial/Maura/TerceraParte.pdf · La Biblia, por su parte, hace repetidas menciones de la mujer y sobre el comporta-

157ESPANtildeOLAS DE ULTRAMAR EN LA HISTORIA Y EN LA LITERATURA

bieacuten su caraacutecter medieval en la manera de hacer apostolado y de entender y tratar a los potenciales cristianos Si se tienen en cuenta los privilegios y prerrogativas que algunas de las altas jerarquiacuteas eclesiaacutesticas tuvieron no seriacutea superfluo estimar que un respeta-ble porcentaje de la poblacioacuten de origen laquodudosoraquo muy bien podiacutea venir de la misma iglesia Fueron muchas las viacutectimas y muchas las familias divididas por un padre laquoinvi-sibleraquo Gran parte de los hijos o laquosobrinosraquo de estos sacerdotes pasaron a ocupar cargos similares incluyendo los privilegios que estos cargos llevaban consigo como si se trata-se de cualquier otro oficio gremial transmitido generacionalmente regla tan comuacuten en la Europa medieval Todaviacutea a finales del siglo XIII en Espantildea los derechos de los hijos y nietos de los sacerdotes estaban protegidos por la ley sin que hubiesen podido ser erradicados por las reformas gregorianas (Ratcliffe 347)139

Las letras espantildeolas ya se haciacutean eco de estos lances amorosos entre representantes de la Iglesia y ciertas damas del lugar desde los tiempos del poeta riojano Gonzalo de Berceo En su obra maacutes conocida Los milagros de Nuestra Sentildeora Berceo describe con un realismo ingenuo y sencillo relatos de humor y de humanismo sobre aquellos hombres de carne y hueso que eran perdonados por la intercesioacuten de la Virgen Mariacutea Juan Ruiz por su lado haraacute de su Libro de buen amor la obra maacutes representativa en este sentido Seriacutea prolijo recordar la actuacioacuten de la Iglesia durante diversos periacuteodos de la Edad Media no soacutelo en Espantildea sino en toda Europa En la Espantildea musulmana del siglo XII concretamente en Sevilla el comportamiento de los representantes de la iglesia cristia-na (mozaacuterabe) en territorio islaacutemico es duramente criticado por el sevillano Ibn Abdun Este precioso documento muestra el estricto control y falta de confianza que existiacutea sobre la mujer prohibieacutendolas que entrasen en las laquoabominablesraquo iglesias cristianas

porque los cleacuterigos [cristianos] son libertinos fornicadores y sodomi-tas Asimismo debe prohibirse a las mujeres francas que entren en la iglesia maacutes que en diacuteas de funcioacuten o fiesta porque alliacute comen beben y fornican con los cleacuterigos y no hay uno de ellos que no tenga dos o maacutes de estas mujeres con que acostarse Han tomado esta costumbre por haber declarado iliacutecito lo liacutecito y viceversa Convendriacutea pues mandar a los cleacuterigos que se casasen como ocurre en Oriente y que si quie-ren lo hagan (Leacutevi-Provenccedilal 150)

Pese a existir una convivencia paciacutefica durante gran parte de la Edad Media entre los tres credos monoteiacutestas de Espantildea (cristianos musulmanes y judiacuteos) esto no suponiacutea que no existiese desprecio y desconfianza entre estos grupos religiosos Dice Abdun resaltando el peligro que suponiacutea que una mujer entrase en casa de un cleacuterigo cristiano de vida ceacutelibe

No debe tolerarse que haya mujer sea vieja o no en casa de un cleacuterigo mientras eacuteste rehuacutese casarse Obliacutegueseles ademaacutes a circuncidarse co-mo les obligoacute al-Mutadid pues si a lo que dicen siguen el ejemplo de Jesuacutes (iexclDios les bendiga y salve) Jesuacutes se circuncidoacute y precisamente ellos que han abandonado esta praacutectica tienen una fiesta que celebran solemnemente el diacutea de su circuncisioacuten (Leacutevi-Provenccedilal 150-151)

139 Valdriacutea la pena ver si han cambiado mucho las cosas desde hace quinientos antildeos a esta parte o si in-cluso la iglesia moderna ha retrocedido en tolerancia en cuanto a las relaciones sexuales de los representantes de la Iglesia

158 JUAN FRANCISCO MAURA

El historiador argentino Germaacuten Arciniegas recoge un pasaje ilustrativo de lo men-cionado anteriormente pero trasladado al ambiente de la colonia diciendo que incluso en poblaciones pequentildeas como Santa Fe con poco maacutes de un convento y una ermita la fragilidad de la carne enredaba a frailes soldados y virreyes por igual laquoEl buen So-liacutes que murioacute en olor de santidad con la cabeza reclinada sobre un par de ladrillos y en saya de franciscano cruzaba en las noches el solar de su palacio para ir a besar a la Marichuelaraquo (118-19)

Arciniegas recoge tambieacuten un suceso aparecido en el diario de Lima en 1667 que no tuvo que ser extraordinario durante los primeros antildeos de la colonia laquoEl fraile carmelita mdashGrande hereje y siendo sacerdote deciacutea misa gran perro lujurioso deshonesto que relatando sus maldades dijo que en cierta ciudad habiacutea conocido carnalmente a maacutes de trescientas y sesenta mujeres y en un convento de monjas habiacutea cometido muchos sacrilegios Este lo trujeron preso de Buenos Aires por Chileraquo (119)

Las controversias de la iglesia moderna sobre las relaciones que los eclesiaacutesticos de-ben tener con el sexo femenino parece que no han encontrado todaviacutea respuesta Sigue existiendo miedo y recelo a que la mujer comparta no soacutelo poder en la jerarquiacutea de la iglesiacutea sino en la vida privada de los miembros de la institucioacuten En la Nueva Espantildea el primer obispo de Meacutexico Juan de Zumaacuterraga viendo en la mujer un ser de tentacioacuten irresistible prohibioacute terminantemente la presencia de eacutestas en su casa Ni siquiera para su limpieza y aseo El franciscano Juan de Torquemada se refiere a este comportamien-to como una de las virtudes del popular obispo

Fue este benditiacutesimo prelado muy amigo de la virtud y de virtuosos y aceacuterrimo reprehendedor de vicios y viciosos y tan enemigo de la ociosidad que no permitiriacutea que alguno de su casa estuviese ocioso fue amiciacutesimo de la limpieza por lo cual jamaacutes consintioacute que mujer alguna entrase en su casa aunque fuese necesaria al servicio de ella ni nunca consintioacute que por alguna ocasioacuten subiese mujer a lo alto y aposentos de ella antes lo teniacutea todo cerrado como un monasterio porque sabiacutea (como quien tambieacuten sabiacutea) que la ocasioacuten suele derribar los maacutes fuertes y robustos corazones (450 lib 20 cap 31)

No fueron uacutenicamente miembros de la iglesia catoacutelica los que valoraron la lucha con-tra la tentacioacuten siguiendo al pie de la letra el crudeliacutesimo refraacuten laquoentre santa y santo pared de cal y cantoraquo Se tienen algunas noticias de la vida social de los primeros tiem-pos de la colonia En estos documentos se puede observar coacutemo no distaban mucho las oacuterdenes que se dictaban en la metroacutepoli y las que se llevaban a cabo en la Nueva Espantildea La vida social tanto de damas como de algunos miembros de la iglesia de las colonias era maacutes laquorelajadaraquo de lo que las normas permitiacutean Gracias a la informacioacuten ofrecida por Manuel Romero de Terreros disponemos de los nombres de las primeras virreinas

Las esposas de los primeros cinco Virreyes Don Antonio de Mendoza Don Luis de Velasco Don Gastoacuten de Peralta Don Martiacuten Enriacutequez de Almanza y Don Lorenzo Suaacuterez de Mendoza Conde de la Coruntildea fueron respectivamente Dontildea Caterina de Vargas Dontildea Ana de Cas-tilla y Mendoza hija de Don Diego de Castilla Sentildeor de Gor y Caba-

159ESPANtildeOLAS DE ULTRAMAR EN LA HISTORIA Y EN LA LITERATURA

llerizo de Carlos V Dontildea Leonor de Vieo Dontildea Mariacutea Manrique hija del Marqueacutes de Aguilar y Dontildea Catalina de la Cerda hija del segundo Duque de Medinaceli (Romero 2)

Existen noticias concretas de la seacuteptima virreina de la Nueva Espantildea (1586) dontildea Blanca de Velasco marquesa de Villamanrique En ellas destaca lo anteriormente men-cionado sobre la falta de tolerancia existente en aquellos tiempos difiacutecilmente com-prensible si no fuera por fragmentos esporaacutedicos conservados sobre la vida colonial en la Nueva Espantildea En la siguiente Relacioacuten hecha por autores anoacutenimos sobre la visita que hizo Fray Alonso Ponce Comisario General de la Orden Seraacutefica a las provincias de la Nueva Espantildea se mencionan las eneacutergicas medidas que con los miembros de su orden en su opinioacuten de moral laquomuy relajadaraquo tomoacute este religioso Tambieacuten aparecen mencionadas sus relaciones con la Virreina

Captoacutese ademaacutes la enemistad del gobernante y de la Virreina Dontildea Blanca de Velasco hija del cuarto Conde de Nieva sentildeora seguacuten pare-ce de conducta ligera y caraacutecter maacutes que dominante laquoPor este mismo tiempo (septiembre de 1586) fueron el Virey y la Vireyna a holgarse y recrearse en la cibdad de Xochimilco Posoacute con toda su casa dentro de nuestro convento en un dormitorio deacutel y detuacutevose alliacute siete u ocho diacuteas en que los indios les hicieron grandes fiestas aunque les costaron caras porque en una dellas murieron dos o tres dellos con un tiro que se disparoacute y reventoacute y al principal indio de aquella cibdad hirieron muy malraquo (Romero 3-4)

A pesar del riacutegido control eclesiaacutestico y civil que habiacutea en la Nueva Espantildea existieron tambieacuten pareacutentesis en los que incluso miembros de la iglesia y mujeres mdashhumanos al fin y al cabomdash pudieron disfrutar de algunos momentos de regocijo y alegriacutea Con-tinuando con la cita anterior el mismo autor se queja del laquoexcesoraquo de libertad en los frailes que se suponiacutea que teniacutean que profesar una extremada pobreza y no digamos castidad En primer lugar se describen pormenorizadamente la abundancia en el tipo y cantidad de comida de toda clase dulces y vino que se consumieron con largueza y generosidad durante aquellas fiestas Pero lo que maacutes indigna al autor (o autores) fue que llegasen a entrar mujeres en el convento

y aunque todo esto es malo delante de Dios y delante de los hom-bres lo que maacutes mal parecioacute y de que todo el mundo tuvo que mur-murar fueacute la demasiada libertad rotura y disolucioacuten que hubo en en-trar y estar muy de propoacutesito mujeres no soacutelo la Vireyna y las suyas sino otras muchas dentro del dicho convento y andar por las celdas como si fuese cosa profana y como si no hubiera breve apostoacutelico que soacute graves penas y censuras prohibe estas entradas y como si a los frai-les no los comprendiera el dicho breve por admitirlas y no estuviera asiacute declarado y mandado por nuestros estatutos generales de Toledo (Romero 4-5)

La preocupacioacuten por las laquotentaciones de la carneraquo fuera del matrimonio siempre es-tuvo en la mente de los religiosos espantildeoles asiacute como de otras nacionalidades y reli-

160 JUAN FRANCISCO MAURA

giones que intentaban vanamente erradicar algo tan intriacutenseco al ser humano como a cualquier otra especie animal Esta preocupacioacuten se acentuoacute mucho maacutes en el Nuevo Mundo donde muchas sociedades tribales no veiacutean a la mujer como parte integrante de su propiedad privada La razoacuten es obviamente socioloacutegica y ha existido desde el principio de los tiempos en las civilizaciones maacutes primitivas laquoNo desearaacutes a la mujer del proacutejimoraquo El quebrantar este precepto equivaldriacutea a desestabilizar desde su base a la sociedad judeo-cristiana fundamentada en la familia Las penas aplicadas en estas transgresiones seraacuten lo suficientemente severas como para marginar socialmente mdashen el mejor de los casosmdash a aquellos que las pongan en praacutectica Siendo la mujer la encar-gada por la naturaleza de trasmitir la descendencia de la especie su libertad sexual se veraacute limitada por el peligro de quedar embarazada cada vez que ignore tal elemental precepto140

Primeras escritoras del Nuevo Mundo

Contra cuerdos y contra locos estaacute obligado cualquier caballero andante a volver por la honra de las mujeres cualesquiera que sean Cuanto maacutes por las reinas de tan alta guisa y pro como fue la reina Madaacutesima a quien yo tengo particular aficioacuten por sus buenas partes porque fuera de haber sido fermosa ademaacutes fue muy prudente y muy sufrida en sus calamidades que las tuvo muchas (Cervantes Don Quijote)

Fueron varias las escritoras que durante los siglos XVI y XVII tuvieron una relacioacuten di-recta o indirecta con el Nuevo Mundo Muchas de ellas eligieron la vida monaacutestica mdashen algunos casos como refugio huyendo de sus maridosmdash uacutenica salida en una estructura social en donde no eran muchas las opciones especialmente en una eacutepoca donde el fac-tor religioso pesaba casi tanto como el econoacutemico pero sobre todo para dedicarse a una vida espiritual difiacutecilmente alcanzable en otras circunstancias Mariloacute Vigil apunta que las monjas que lo eran por su propia voluntad ademaacutes de tener inquietudes religiosas tambieacuten las teniacutean intelectuales como es el caso de la escritora miacutestica espantildeola Santa Teresa de Jesuacutes (1515-1582) que ademaacutes de tener una de las vidas maacutes interesantes que se conozcan supo sacar tiempo para escribir las maacutes bellas manifestaciones de la poesiacutea liacuterica y sobre todo de la prosa castellana (Vigil 237-38) Cada una de estas mujeres de-dicadas a la vida literaria y espiritual de su tiempo se merece muchiacutesimo maacutes espacio del que se les pueda ofrecer en estas pocas liacuteneas No obstante con estas pasajeras men-

140 Aunque afortunadamente las cosas han cambiado para la mujer no se debe dejar de mencionar la can-tidad de abusos sexuales de la que es viacutectima en la sociedad moderna

161ESPANtildeOLAS DE ULTRAMAR EN LA HISTORIA Y EN LA LITERATURA

ciones se espera al menos incluirlas y poder despertar el suficiente intereacutes para que sus vidas y sus obras no sigan sumergidas en las simas del olvido Para que estas mujeres de la iglesia pudiesen satisfacer su curiosidad cognoscitiva era necesario romper todas aquellas barreras que supusiesen un estorbo o una restriccioacuten a la hora de investigar consultar o hablar con cualquier persona religiosa de cualquier orden o secular ya fue-se obispo o cleacuterigo Las posiciones intelectuales entre las diferentes oacuterdenes religiosas fueron muy dispares como bien es sabido No eran iguales los planteamientos teoloacute-gicos de los dominicos que los de los franciscanos o los de los carmelitas que los de los agustinos o jesuitas Era necesario por lo tanto tener acceso a estas fuentes de informa-cioacuten para poder constrastar las diferencias y hacer valoraciones propias (Vigil 237-38) El escritor espantildeol Caro Baroja destaca el caraacutecter enciclopeacutedico del catolicismo donde se han integrado corrientes y posturas muy dispares que a traveacutes del diaacutelogo daban cierto espacio al creyente con maacutes curiosidad intelectual para que este pudiese compa-rar y valorar las diferentes opciones que se le ofreciacutean (Vigil 237-38)

Varias de estas mujeres intelectuales fueron hijas de conquistadores que aunque na-cidas en suelo americano seguiacutean expresaacutendose en la lengua de sus padres con no me-nos fuerza que sus contemporaacuteneas peninsulares Es cierto que existieron numerosas escritoras en el Nuevo Mundo durante el siglo XVIII algunas dedicadas incluso al estudio de las matemaacuteticas como la mexicana Dontildea Francisca Gonzaga y Castillo Pero para limitar el presente trabajo a los siglos XVI y XVII uacutenicamente se incluiraacuten ejemplos de estos dos siglos

La peruana Josefa de Alarcoacuten publicoacute en 1648 unas liras dedicadas a las Exequias del Priacutencipe Baltasar Carlos

Cifro en capilla breveEl tribunal de la Magestad maacutes graveEn fe de lo que debeA Carlos que en dos mundos no cabe141

El caso de Sor Jeroacutenima de la Asuncioacuten es muy interesante una mujer que tuvo la oportunidad de viajar a Meacutexico y posteriormente a las Filipinas para cumplir con las mi-siones que le habiacutean sido encomendadas por su orden Nacida en Toledo en 1555 en el seno de una noble y acaudalada familia estuvo destinada a recorrer el mundo ofrecien-do sus servicios a todos los necesitados distinguieacutendose por su ardiente caridad laquovien-do que los galeotes eran tratados con dureza excesiva sobre todo cuando los llevaban de un pueblo a otro procuroacute aliviar las penas de aquellos desgraciados y lo consiguioacute en parteraquo (Serrano y Sanz 268 65) Hija del licenciado e ilustre jurista Pedro Garciacutea Yaacute-ntildeez y de dontildea Catalina de la Fuente ingresoacute contra su voluntad en el monasterio de las Clarisas de Santa Isabel de los Reyes (Toledo) el 5 de agosto de 1570 (Trevintildeo 46) hay que decir que eacutesta no seraacute la uacutenica voluntad contra la que tuvo que luchar

Sor Jeroacutenima se embarcoacute para Meacutexico y de alliacute partioacute hacia Manila junto con siete compantildeeras en el famoso laquoGaleoacuten de Manilaraquo que saliacutea anualmente del puerto mexi-cano de Acapulco Su viaje a las Filipinas duroacute un antildeo y tres meses desde su salida de Espantildea tiempo en el que demostroacute un gran valor y determinacioacuten por el soacutelo hecho de

141 Manuel Serrano y Sanz Apuntes para una biblioteca de escritoras espantildeolas desde el antildeo 1401 al 1833 vols 268 269 270 271 Biblioteca de Autores Espantildeoles (Madrid Atlas 1975) 268 19

162 JUAN FRANCISCO MAURA

embarcarse en tan precarias naves Fue la primera misionera de Oceaniacutea muriendo en Manila en 1621 Alliacute fundoacute el monasterio de Santa Clara que perviviriacutea hasta ser bom-bardeado en la Segunda Guerra Mundial (Trevintildeo 47) Escribioacute su Vida donde trata de la fundacioacuten del convento y de todas las tribulaciones mdashllegoacute a ser excomulgadamdash y satisfacciones que una vida dedicada a una causa justa proporciona Tambieacuten escribioacute una obra de caraacutecter filosoacutefico-teoloacutegico titulada Carta de marear en el mar del mundo nombre alegoacuterico que da cuenta de la enorme distancia recorrida a traveacutes del laquomar del espiacuterituraquo por sor Jeroacutenima He aquiacute algunos de sus versos de caraacutecter religioso

Vuestra soy para vos naciacuteiquestQueacute mandaacuteis hacer de miacute Inaccesible grandezaEterna Sabiduriacuteay bondad del alma miacuteaDios un ser poder y Altezamirad la suma pobrezade eacutesta que se ofrece aquiacuteiquestQueacute mandaacuteis hacer de miacute (Serrano y Sanz 268 66)

Ya en Meacutexico tenemos otro ejemplo de una mujer dedicada por completo a Dios y al estudio y composicioacuten de obras de caraacutecter teoloacutegico Dontildea Ana Mariacutea del Costa-do de Cristo nacida en la ciudad de Tlaxcala hacia el antildeo 1650 Tomoacute la orden de San Francisco para consagrarse a las labores de su orden y a la escritura Se dice que con los escritos de Dontildea Ana Mariacutea se podriacutean formar veinte tomos (Serrano y Sanz 268 282) Estas son algunas de sus obras Vida y muerte de Jesucristo Nuestro Sentildeor Vida del Seraacutefico Padre San Francisco de Asiacutes Vida de la iacutenclita Virgen Santa Clara Vida del sutiliacutesimo doctor Juan Duns Escoto

Pero no todas las monjas tuvieron vidas tan dedicadas al estudio y la oracioacuten Loacutegica-mente entre un nuacutemero tan grande de mujeres existioacute de todo y seriacutea un error pensar que todos los conventos femeninos estaban integrados por laquocaacutendidas palomasraquo Una monja en el siglo XVI y XVII teniacutea mucha maacutes fuerza que una mujer ordinaria ya que actuaban en grupo y la entrada a los recintos donde viviacutean estaba permitida solo a mu-jeres Esta situacioacuten las haciacutea mucho maacutes fuertes a todos los niveles que una mujer sola protegida uacutenicamente por su familia laquoLas monjas durante los siglos XVI y XVII lucharon por eludir la clausura y por zafarse del control que los frailes de las secciones masculi-nas de sus congregaciones ejerciacutean sobre ellasraquo (Vigil 230) Soacutelo un antildeo maacutes tarde que dontildea Ana Mariacutea del Costado de Cristo en 1651 y a 12 leguas de Meacutexico nacioacute la sin par Sor Juana Ineacutes de la Cruz hija de don Pedro Manuel de Asbaje natural de Vergara (Vizcaya) y de Dontildea Isabel Ramiacuterez de Santillana hija de espantildeoles (Serrano y Sanz 268 289) Por ser sin lugar a dudas la poeta maacutes importante de su tiempo y probable-mente la maacutes conocida del mundo hispano no profundizaremos en ella Su obra es un canto a la inteligencia y el exponente maacutes destacado de la literatura barroca americana tanto en prosa como en verso Destacareacute simplemente que Sor Juana Ineacutes pese a vivir en un sociedad donde no eran excesivas las libertades concedidas a las mujeres tuvo el caraacutecter y la determinacioacuten de dejarnos las maacutes bellas poesiacuteas amorosas que si bien estuvieron enmarcadas en un ambiente religioso como era de esperar por su condicioacuten

163ESPANtildeOLAS DE ULTRAMAR EN LA HISTORIA Y EN LA LITERATURA

pudieron transcender como unas de las maacutes bellas manifestaciones literarias que hoy en diacutea se conservan Fue su agudeza mental sensibilidad y cultura tal que no fueron suficientes los soacutelidos muros del convento para contener el genio de tan extraordinaria mujer Recordemos sus conocidiacutesimos versos en defensa de las mujeres

Hombres necios que acusaacuteisa la mujer sin razoacutensin ver que sois la ocasioacutende lo mismo que culpaacuteis142

Las metaacuteforas y la delicadeza que emplea en rebatir a su obispo en su laquoRespuesta a sor Filotea de la Cruzraquo no son solamente el epiacutetome del feminismo de su tiempo sino una de las maacutes brillantes manifestaciones del barroco hispano Poesiacutea teatro ensayo y un conocimiento extraordinario de las ciencias claacutesicas de su tiempo hacen de esta mujer un ejemplo extraordinario de las letras universales Ya son cientos los artiacuteculos y libros que se han escrito sobre Sor Juana y no dejan de aparecer tesis doctorales sobre los maacutes diversos temas conectados con la citada autora143 Como nos dice Stephanie Merrim en su documentada obra Early Modern Womenrsquos Writing and Sor Juana Ineacutes de la Cruz

She wrote and published on secular themes as atypical for a nun as human love Her remarkably extensive writings essayed and reenacted most of the (male) poetic dramatic theological and even philosophi-cal discourses of her times in the metropolis making her works a com-pendium of baroque culture in its diversity and syncretism Sor Juana self-creation as a learned women effectively toppled many of the walls in which she was materially enclosed and positioned her within the dynamic world of early modern European culture (xii)

No se debe dejar de mencionar a otras escritoras novohispanas de la eacutepoca que aun-que no fueron tan proliacuteficas y relevantes como Juana Ineacutes de la Cruz dejaron testimo-nio de algunos acontecimientos que tienen intereacutes socioloacutegico o testimonial Este es el caso de Dontildea Mariacutea Estrada Medinilla de igual nombre y apellido que la mujer que acompantildeoacute a las tropas de Corteacutes en su primera entrada a Meacutexico Natural de Meacutexico publicoacute toda su obra a mediados del siglo XVII concentraacutendose principalmente en la lle-gada del Marqueacutes de Villena virrey y capitaacuten general de la Nueva Espantildea a la ciudad de Meacutexico en el antildeo 1640 Escrita en octavas reales la obra trata de las fiestas de toros y cantildeas con que se obsequioacute al citado virrey Fue impresa en Meacutexico en 1641 (Serrano y Sanz 269 402)

Mucho maacutes importante para el presente libro es Dontildea Isabel de Guevara que escribioacute en 1556 la carta en que se expone la ayuda que ofrecieron las mujeres en el descubri-miento y conquista del Riacuteo de la Plata No cabe la menor duda de que esta carta es uno

142 Para una mejor comprensioacuten del caraacutecter de esta excepcional mujer veacutease entre los numeros trabajos publicados Fredo Arias de la Canal Intento de psicoanaacutelisis de Juana Ineacutes y otros ensayos sorjuanistas (Meacutexico Frente de Afirmacioacuten Hispanista 1972) 47

143 Veacuteanse entre otros trabajos Octavio Paz Sor Juana Ineacutes de la Cruz o las trampas de la fe Georgina Sabat de Rivers En busca de Sor Juana Margo Glantz Sor Juana la comparacioacuten y la hipeacuterbole Gerard C Flynn Sor Juana Ineacutes de la Cruz Stephanie Merrim Feminist perspectives on Sor Juana Ineacutes de la Cruz Pamela Kirk Sor Juana Ineacutes de la Cruz religion art and feminism

164 JUAN FRANCISCO MAURA

de los documentos maacutes importantes con que contamos en relacioacuten a la aportacioacuten fe-menina en el proceso de la conquista de Ameacuterica Su importancia viene dada por varios factores Primero es uno de los primeros testimonios mdashsi no el primeromdash en donde se expone abiertamente la indispensable colaboracioacuten de las mujeres en el descubrimien-to y conquista de tierras en el Nuevo Mundo laquoQue si no fuera por ellas todos fueran acabadosraquo En segundo lugar la informacioacuten vertida en estas liacuteneas presenta en parte la manera de pensar de una mujer espantildeola en tales circunstancias Extraordinario tes-timonio de primera mano que nos da una idea de lo que significoacute en muchos casos el valor y entrega constantes de muchas de estas mujeres que auacuten a riesgo de perder sus vidas no dudaron en luchar al lado de los hombres por una causa que consideraban laquocomuacutenraquo

La relevancia histoacuterica de dicha carta hace que merezca ser transcrita en su totali-dad

Carta de dontildea Isabel de Guevara a la princesa gobernadora dontildea Juana exponiendo los trabajos hechos en el descubrimiento y conquista del Riacuteo de la Plata por las mujeres para ayudar a los hombres y pidiendo repartimiento

para su marido Asuncioacuten 2 de julio de 1556

Muy alta y muy poderosa sentildeora

A esta provincia del Riacuteo de la Plata con el primer gobernador de ella don Pedro de Mendoza hemos venido ciertas mujeres entre las cuales ha querido mi ventura que fuese yo la una y como la armada llegase al puerto de Buenos Aires con mil quinientos hombres y les faltase el bastimento fue tamantildea el hambre que a cabo de tres meses murie-ran los mil esta hambre fue tamantildea que ni la de Jerusalem se le puede igualar ni con otra ninguna se puede comparar Vinieron los hombres en tanta flaqueza que todos los trabajos cargaban de las pobres mu-jeres asiacute en lavarles las ropas como en curarles hacerles de comer lo poco que teniacutean limpiarlos hacer centinela rondar los fuegos armar las ballestas cuando algunas veces los indios les veniacutean a dar guerra hasta cometer a poner fuego en los versos y a levantar los soldados los que estaban para ello dar arma por el campo a voces sargentean-do y poniendo en orden los soldados porque en este tiempo como las mujeres nos sustentamos con poca comida no habiacuteamos caiacutedo en tanta flaqueza como los hombres Bien creeraacute V A que fue tanta la so-licitud que tuvieron que si no fuera por ellas todos fueran acabados y si no fuera por la honra de los hombres muchas maacutes cosas escribiera con verdad y los diera a ellos por testigos Esta relacioacuten bien creo que la escribiraacuten a V A maacutes largamente y por eso cesareacute Pasada esta tan peligrosa turbunada determinaron subir el riacuteo arriba asiacute flacos como estaban y en entrada de invierno en dos bergantines los pocos que quedaron vivos y las fatigadas mujeres los curaban y los miraban y les guisaban la comida trayendo la lentildea a cuestas fuera del naviacuteo y animaacutendolos con palabras varoniles que no se dejasen morir que presto dariacutean en tierra de comida metieacutendolos a cuestas en los

165ESPANtildeOLAS DE ULTRAMAR EN LA HISTORIA Y EN LA LITERATURA

bergantines con tanto amor como si fueran sus propios hijos Y como llegamos a una generacioacuten de indios que se llaman tinbues sentildeores de mucho pescado de nuevo los serviacuteamos en buscarles diversos modos de guisados porque no les diese en rostro el pescado a causa de que lo comiacutean sin pan y estaban muy flacos Despueacutes determinaron subir el Paranaacute arriba en demanda de bastimento en el cual viaje pasaron tanto trabajo las desdichadas mujeres milagrosamente quiso Dios que viviesen por ver que en ellas estaba la vida de ellos porque todos los servicios del naviacuteo los tomaban ellas tan a pechos que se teniacutea por afrentada la que menos haciacutea que otra sirviendo de marear la vela y gobernar el naviacuteo y sondar de proa y tomar el remo al soldado que no podiacutea bogar y escotar144 el naviacuteo y poniendo por delante a los soldados que no se desanimasen que para los hombres eran los trabajos verdad es que a estas cosas ellas no eran apremiadas ni las haciacutean de obliga-cioacuten ni las obligaba si solamente la caridad Asiacute llegaron a esta ciudad de la Asuncioacuten que aunque ahora estaacute muy feacutertil de bastimentos en-tonces estaba de ellos muy necesitada que fue necesario que las muje-res volviesen de nuevo a sus trabajos haciendo rosas con sus propias manos rosando y carpiendo y sembrando y recogiendo el bastimento sin ayuda de nadie hasta tanto que los soldados guarecieron de sus fla-quezas y comenzaron a sentildeorear la tierra y adquirir indios e indias de su servicio hasta ponerse en el estado en que ahora estaacute la tierra He querido escribir y traer a la memoria de V A para hacerle saber la ingratitud que conmigo se ha usado en esta tierra porque al presente se repartioacute por la mayor parte de los que hay en ella asiacute de los anti-guos como de los modernos sin que de miacute y de mis trabajos se tuviese ninguna memoria y me dejaron de fuera sin me dar indio ni ninguacuten geacutenero de servicio Mucho me quisiera hallar libre para me ir a presen-tar delante de VA con los servicios que a SM he hecho y los agravios que ahora se me hacen mas no estaacute en mi mano porque estoy casada con un caballero de Sevilla que se llama Pedro de Esquivel que por servir a SM ha sido causa que mis trabajos quedasen tan olvidados y se me renovasen de nuevo porque tres veces le saqueacute el cuchillo de la garganta como allaacute VA sabraacute A que suplico mande me sea dado mi repartimiento perpetuo y en gratificacioacuten de mis servicios [en el origi-nal del AHN Diversos doc 141 dice ademaacutes mande que sea proveydo mi marido de alguacuten cargo conforme a la calidad de su persona pues el de su parte por sus servicios lo merece] lo merece Nuestro sentildeor acre-ciente su Real vida y estado por muy largos antildeos De esta ciudad de la Asuncioacuten y de julio 2 1556 antildeosServidora de V A que sus Reales manos besa

Dontildea Isabel Guevara

144 Sacar agua de un riacuteo acequia o presa

166 JUAN FRANCISCO MAURA

Sobremdash A la muy alta y muy poderosa sentildeora Princesa dontildea Joana Gobernadora de los reinos de Espantildea etc ndash En su Consejo de Indias (Isabel de Guevara 619-21)

Iroacutenicamente la carta teniacutea que llegar a manos de la desdichada heredera del trono de Castilla e hija de los Reyes Catoacutelicos Juana laquola Locaraquo que habiacutea muerto el antildeo an-terior Son profeacuteticas las palabras de esta mujer no soacutelo porque sus hechos personales quedasen en el olvido sino porque incluso se ha borrado la historia de las mujeres en el Nuevo Mundo negando su presencia Por lo menos Isabel Guevara tuvo acceso a una pluma iquestCuaacutentas seriacutean las que ni siquiera sabriacutean escribir

Otra contemporaacutenea fue dontildea Leonor de Iciz que vivioacute durante la segunda mitad del siglo XVI Interesa sobre todo por los sonetos que escribioacute en elogio de Ercilla soldado que participoacute en la conquista de Chile y que se inmortalizoacute con su obra La Araucana (Serrano y Sanz 269 534) Lo mismo hizo Dontildea Bernarda Lintildeaacuten en 1610 autora de otro soneto en memoria del capitaacuten Gaspar Peacuterez de Villagraacute que participoacute en la conquista de Nuevo Meacutexico (Serrano y Sanz 270 14) Los escritos de estas mujeres tratan de de dos de las eacutepicas maacutes dramaacuteticas de la conquista

En el Peruacute y en pleno siglo XVII aparece otra fundadora de conventos Sor Bernardina de Jesuacutes que ademaacutes fue comparada con Santa Teresa por la semejanza de sus laquocartasraquo con las de la santa de Avila Fue fundadora del convento de Tacunga en Quito maacutes tarde destruiacutedo por un terremoto Dice Serrano y Sanz con respecto a su biografiacutea un tanto legendaria que fue carmelita descalza de Lima y hermana de Dontildea Mariacutea Benavides y Esquivel abuela de D Pedro de Peralta Barnuevo (Serrano y Sanz 269 553) Dicen que esta santa se alimentoacute durante treinta antildeos con laquochochos y caacutescaras de naranja hecho tan raro como increiacuteble Cuando fallecioacute reparaban las monjas en ponerle una vara de azucenas porque habiacutea sido casada y aquellas flores aparecieron milagrosamente sobre el cadaacuteverraquo (Serrano y Sanz 269 553)

Otra limentildea del primer cuarto del siglo XVII con reputacioacuten de santa fue Dontildea Luisa Melgarejo En este caso no se trata de una religiosa de oficio sino de la mujer del doctor Juan de Soto La uacutenica diferencia es que dontildea Luisa al parecer teniacutea laquovisiones y reve-lacionesraquo lo que debioacute poner nervioso a maacutes de un miembro del tribunal del laquoSanto Oficioraquo que consideraron sus escritos laquoculpadosraquo De su papel de laquosantaraquo pasa por lo tanto al de laquoposesaraquo o laquoendemoniadaraquo El inquisidor de Lima Gaitaacuten escribioacute un infor-me donde a traveacutes de la opinioacuten puacuteblica y de otras averiguaciones se deciacutea que dontildea Luisa Melgarejo laquomujer santaraquo sabiacutea cuando las almas de los difuntos saliacutean del Purga-torio El diacutea 14 de noviembre de 1623 se decidioacute tomar posesioacuten de todos los cuadernos en los que habiacutea escrito las experiencias de todos sus laquoarrobos suspensiones extasis y revelacionesraquo Estos cuadernos una vez recogidos presentaron toda una serie de al-teraciones borrones adiciones enmiendas incluso diferente letra por lo que despueacutes de haber sido examinados resultaron culpables145 Excelente imaginacioacuten debioacute tener dontildea Luisa Melgarejo la suficiente al parecer para convencer a algunos miembros de la iglesia de que en sus escritos laquohabiacutea algoraquo que mereciacutea la pena Estas cosas ocurriacutean en Lima uno de los centros culturales maacutes importantes de la vida social y poliacutetica en la Ameacuterica espantildeola Lima a comienzos del siglo XVII seguacuten el empadronamiento llevado

145 Serrano y Sanz 270 47 Veacutease J T Medina Historia del tribunal del Santo Oficio de la Inquisicioacuten de Lima (1569-1820) (Santiago Imprenta Gutemberg 1887) Tomo II 34-41

167ESPANtildeOLAS DE ULTRAMAR EN LA HISTORIA Y EN LA LITERATURA

a cabo en 1614 por el marqueacutes de Montesclaros era una ciudad de 25000 habitantes de los que 11000 eran espantildeoles El nuacutemero de religiosos y religiosas llegaba a 1720 (Pittaluga 77)

Se sabe que en la Isla de Santo Domingo durante el siglo XVI nacioacute o al menos resi-dioacute una poeta de ceacutelebre apellido en los aconteceres del Nuevo Mundo Dontildea Elvira de Mendoza de la que se conserva un manuscrito en la Real Academia de la Historia laquoCantares miacuteos que estaacuteis rebeladosraquo Eugenio de Salazar hace un elogio de ella como poeta en un Soneto a la ilustre Poeta y Sentildeora Dontildea Elvira de Mendoza moradora en la ciudad de Santo Domingo (Serrano y Sanz 270 53)

Nacida en Burgos sobre el antildeo 1590 dontildea Luisa de Padilla merece un lugar aparte dentro del grupo de mujeres escritoras de su eacutepoca Por su estilo faacutecil y castizo su no-vedad de pensamientos y su rica erudicioacuten recibioacute el siguiente comentario de Manuel Serrano y Sanz laquoPocas figuras hay en nuestra historia literaria femenil que puedan compararse a esta eminente prosista acaso la maacutes notable de cuantas florecieron en Es-pantildea durante el siglo XVIIraquo (Serrano y Sanz 270 95-96) Este comentario y comparacioacuten deberiacutea ampliarse para que tambieacuten incluyese a laquola historia literaria varonilraquo

Dontildea Luisa fue defensora de la labor que la Inquisicioacuten estaba realizando en la laquolim-piezaraquo de mujeres laquosoldados del demonioraquo que existieron en algunas provincias espa-ntildeolas en aquel tiempo Muchas de las mujeres que combinaban la magia con los po-deres curativos fueron condenadas no solamente por hombres de la Inquisicioacuten sino tambieacuten por mujeres de todas las clases sociales como es el caso de Luisa de Padilla condesa de Aranda En su obra Elogios de la verdad e invectiva contra la mentira preveniacutea contra aquellos que practicaban artes en contra de la religioacuten cristiana La magiacutea negra seguacuten Padilla era la causante de que muriesen casi tantas personas como otras causas naturales habieacutendose descubierto hasta seis mil brujas en Vizcaya y Guipuzcua con-fesando una mujer de un pueblo pequentildeo haber matado con su laquomagiaraquo a ochocientas personas (Perry 31) Eran estos laquomales de ojoraquo y maldiciones seguacuten la autora las causas de que se secasen los pechos de las madres lactantes que se separasen las parejas casa-das y que abortasen las embarazadas (Perry 31)

Si se tiene en cuenta que dontildea Luisa estuvo emparentada con la maacutes rancia aristocra-cia de su tiempo o lo que es lo mismo con algunos de aquellos que en cierta manera dirigiacutean los destinos de Espantildea en aquella eacutepoca (Duques de Lerma Duque de Uceda Marqueacutes de Cueacutellar Conde de Santa Gadea Marqueacutes de Belmonte por citar algunos) se comprenderaacute mejor su identificacioacuten con una institucioacuten que en teoriacutea velaba por la salvaguarda de los valores laquoeternosraquo de una Espantildea destinada a ser la campeona del ca-tolicismo durante los siglos XVI y XVII El padre de dontildea Luisa fue don Martiacuten de Padilla y Manrique extraordinario militar que proboacute su valor contra enemigos moriscos ingle-ses holandeses piratas berberiscos y el renegado genoveacutes Muley Faxad Fue veterano de la batalla de Lepanto donde apresoacute a cuatro galeras y acompantildeoacute con su escuadra a la reina Dontildea Margarita de Austria cuando vino de Geacutenova en 1598 laquoHabiacutea obtenido a 24 de julio de 1587 el tiacutetulo de Conde de Santa Gadea y en 1596 el de Capitaacuten General de la Armada del mar Oceacuteanoraquo (Serrano y Sanz 27095-96)

Por otra parte tambieacuten se sabe que dontildea Luisa participoacute directamente y desde tem-prana edad en la praacutectica de algunas actividades intelectuales como la historia y la arqueologiacutea a la vez que dedicaba su tiempo a virtudes cristianas como la caridad y el socorro de los necesitados (Serrano y Sanz 270 97) Resulta mucho maacutes faacutecil compren-

168 JUAN FRANCISCO MAURA

der la postura ideoloacutegica de esta gran mujer si tienen en cuenta ademaacutes de los factores antes mencionados otros tantos de caraacutecter biograacutefico concernientes a su educacioacuten y matrimonio

Otra escritora fue la mexicana dontildea Mariacutea Casilda Pozo natural de Temestla (Meacutexi-co) Nacida en el mes de abril de 1682 dejoacute escrita su biografiacutea en 16 cuadernos el ma-nuscrito original se encuentra en la biblioteca del colegio de San Gregorio de Meacutexico Fue su confesor el jesuiacuteta Domingo Quiroga que fue quieacuten la incitoacute a escribir su obra (Serrano y Sanz 270 137) Sor Juana de San Antonio aparece a principios del siglo XVII formando parte de un grupo de religiosas espantildeolas que fueron a Manila por la ruta de Meacutexico Ademaacutes de distinguirse por sus cualidades personales su obra interesa por ofrecer informacioacuten testimonial y costumbrista acerca de la forma de vestir de chinos y japoneses (Serrano y Sanz 270 225)

Otra monja esta vez ecuatoriana fue Gertrudis de San Ildefonso Nacida en 1652 profesoacute su vocacioacuten en el convento de Santa Cruz de Quito dejando escrita su vida por mandato de su confesor el padre Martiacuten de la Cruz el cual hizo una biografiacutea laquoen tres gruesos voluacutemenesraquo Gertrudis de San Ildefonso murioacute en 1709 (Serrano y Sanz 270 300) en olor de santidad

Sor Mariacutea Ana Agueda de San Ignacio nacioacute el 3 de marzo de 1695 en la dioacutecesis de la puebla de los Angeles en un rancho del lugar de Santiago Tecaliacute (Serrano y Sanz 270300) Esta monja mexicana escribioacute varias obras durante su vida conventual a lo largo de la cual desempentildeoacute el cargo de priora por muchos antildeos Entre sus obras todas de caraacutecter piacuteo y de laquoamor divinoraquo escribioacute un curioso y laquocopiosoraquo tratado de la Leche virginal de la Soberana Madre de Dios El padre Fr Juan de Villa Saacutenchez hace el siguiente comentario al respecto laquoen que hablando primero en sentido natural de los beneficios que debemos a Nuestra Sentildeora pasa a tratar en sentido miacutestico y alegoacuterico enten-diendo en la leche la doctrinaraquo (Serrano y Sanz 270301) Mexicana fue tambieacuten Sor Petronila de San Joseacute que ejercioacute como abadesa del Real monasterio de Jesuacutes Mariacutea de la ciudad de Meacutexico Escribioacute Vidas de varias religiosas ejemplares obra que tiene su im-portancia ya que al parecer laquoDe esta obra se sirvioacute D Carlos de Siguumlenza y Goacutengora para escribir su Parayso Occidental (Meacutexico 1684) seguacuten eacutel mismo declara en el proacutelogo diciendo lsquoa quien si hay algo bueno en esta historia se le debe todorsquoraquo (Serrano y Sanz 270 354) Menos conocida fue su compatriota Sor Luisa de Santa Catalina natural de Xacona laquopueblo situado en las inmediaciones de Zamora (Meacutexico)raquo siendo bautizada en 1682 Escribioacute Cartas espirituales a su confesor el P Juan Loacutepez de Aguado (Serrano y Sanz 270 361-62)146

Todos estos escritos la mayoriacutea de ellos ignorados por el gran puacuteblico tienen la im-portancia de darnos una perspectiva diferente En otras palabras ensentildearnos la maacutes refinada sensibilidad de muchas mujeres que permanecieron y en su mayoriacutea siguen permaneciendo a laquooscurasraquo de una eacutepoca tan rica de la literatura espantildeola como fue el Siglo de Oro Este siglo fue tambieacuten en su dimensioacuten literaria y artiacutestica patrimonio de la mujer

146 Para profundizar en muchas de estas escritoras hispano-americanas la consulta de la Biblioteca Hispano-Americana de Beristain de Souza resulta de capital importancia

169ESPANtildeOLAS DE ULTRAMAR EN LA HISTORIA Y EN LA LITERATURA

Sor Nada ardores divinos de una monja adolescente escritos ineacutedi-tos de una recieacuten profesa del siglo XVI147

iexclQueacute encantadores son tus amores hermana miacutea espo-sa iexclQueacute deliciosos son tus amores maacutes que el vino Y el aroma de tus perfumes es mejor que el de los baacutelsamos Miel virgen destilan tus labios esposa miel y leche hay en tu lengua y el perfume de tus vestidos es como aroma de incienso (Cantar de los Cantares 4 10-11)

Sor Nada llamada asiacute por humildad seguacuten dice el Indice de manuscritos de la Biblio-teca Nacional de Madrid es uno de los ejemplos maacutes desconocidos e interesantes que tenemos de la poesiacutea y prosa amoroso-religiosa del siglo XVII Hasta la fecha nunca se habiacutea publicado su obra e incluso hasta el antildeo 1995 para mi sorpresa no habiacutea copias microfilmadas de sus manuscritos en la Biblioteca Nacional Serrano y Sanz en su libro Apuntes para una Biblioteca de Escritoras Espantildeolas hace una escueta y pasajera mencioacuten de esta mujer y de su obra (68-69) siendo eso todo lo que hasta ahora se sabiacutea de ella Sus escritos consisten en los siguientes manuscritos

1 laquoEn queacute consiste un verdadero amor de Diosraquo 9 hojas uacutetiles en 4ordm letra del siglo XVII Biblioteca Nacional de Espantildea Manuscrito 1295926

2 laquoPintura del Propio Amorraquo laquoPintura del propio Amorraquo 10 hojas uacutetiles en 4ordm letra del siglo XVII Biblioteca Nacional de Espantildea Manuscrito 1295927

3 laquoEsplicacioacuten sobre en queacute consiste la paz del Almaraquo laquoQuartillas aacute un Alma que padece soledad interiorraquo 7 hojas uacutetiles en 4ordm letra del siglo XVII Biblioteca Nacio-nal de Espantildea Manuscrito 1295828

En cuanto a su persona soacutelo se nos dice que laquose encubrioacute con este seudoacutenimo laquoSor Nadaraquo Esta monja desconocida de origen hispanoamericano posee toda la frescura e ingenuidad de una joven apasionada metida por vocacioacuten u obligacioacuten a ejercer la profesioacuten maacutes comuacuten para mujeres de cierta clase social de su tiempo En sus liacuteneas podemos encontrar un misticismo simple incluso en algunos momentos infantil pero a su vez lleno de una fuerza y sensualidad interior poco comuacuten en escritos de este geacute-nero que desborda los liacutemites del laquoamor divinoraquo a traveacutes de los diaacutelogos entre el Alma y el Esposo Sor Nada consigue proyectar su amor a Dios maacutes allaacute de una experiencia romaacutentica Su experiencia es sincera y genuinamente miacutestica trascendiendo la imita-cioacuten o la propia creacioacuten poeacutetica ficcionalizada (Hatzfeld 30) Algunos pasajes son de un

147 Veacutease mi artiacuteculo Sor Nada ardores divinos de una monja adolescente escritos ineacuteditos de una monja profesa del siglo XVIIraquo Espeacuteculo Revista de estudios literarios 26 (2004) 1-10 Universidad Complutense de Madrid http wwwucmesinfoespeculonumero26sornadahtml

170 JUAN FRANCISCO MAURA

alto contenido eroacutetico con sustantivos y metaacuteforas que recuerdan la maacutes iacutentima unioacuten amorosa en unos casos y el tierno amor maternal en otros

[T]e miro Jesus mio desnudo a las inclemencias del tiempo y ardien-do en puro fuego de Amor por la salud de las Almas y me ensentildeas a que te ame con todo mi corason y puresa de espiritu No atendiendo ni buscando umanos intereses ni a solisitar consuelos ni regalos espi-rituales que suelen empantildear la puresa del noble corason No mi Jesus amable pues antes me ensentildeaste tu puro Amor que desnudo sean [sic] de encaminar mis passos desde el pesebre asta la cuna en donde te miro tan desnudo como el pesebre y todo Sentildeor por mi Amor (Mss 12959 26 hoja 1 v)

El manuscrito (12959 27) de la mencionada serie de tres contiene algunas correccio-nes quizaacute hechas por el confesor o quizaacute por ella misma cuando se dirige con excesiva familiaridad y arrebatado fervor a su Amado148 He escogido el manuscrito (12959 Caja 28) en primer lugar por ser el ejemplo maacutes representativo de su poesiacutea y prosa En este manuscrito encontramos de forma maacutes directa que alegoacuterica toda la frescura de un diaacutelogo entre Jesuacutes y el alma que raya como diriacutea Cervantes laquoa la llana y sin rodeosraquo (667 lib 2 cap 38) con el doloroso y a veces desesperado deseo de la entrega y la unioacuten final con el Amado La ortografiacutea no ha sido corregida respetaacutendose el texto ori-ginal149 Veamos el siguiente fragmento

Mira que te amo con Amor de padre y con Amor de esposo el mas fino y puro enamorado que no tan solo me presio de darte mi mano sino tambien todo mi cuerpo y sangre para que con mi pan de vida te sustentes y te regales a tus anchuras y que con mi propio espiritu vivas en paz como tu lo deseas y que mis amores sean unico alivio en tus trabajos en esta mortal vida pues si esto es asi y sabes que muero por darte vida dime esposa mia de que te fatigas Dame querida tus bras-sos y dime si me amas como yo te amo (Hoja 4)

148 La antologiacutea de Promis ha procurado insertar entre los textos antoloacutegicos algunos que se refieren a la es-critura de mujeres fundamentalmente de aquellos generados en el interior de los espacios conventuales Estos textos se fundan como laquohistorias de vidasraquo y responden casi siempre a los requerimientos de los confesores de las monjas coloniales En este sentido resulta valiosiacutesima la incorporacioacuten de la llamada Relacioacuten autobiograacute-fica de Sor Ursula Suaacuterez como una muestra significativa de la escritura monjil entendida en esta eacutepoca (como tambieacuten en la tradicioacuten europea medieval) inserta en las denominadas laquolabores de manoraquo de las religiosas ya que el texto escrito por mandato se convertiacutea en una suerte de entramado o tejido linguumliacutestico es decir en un nuevo bordado que la mayor parte de las veces el confesor convertido en censor iba haciendo tachando y enmendando En la antologiacutea Promis agrega un texto de Sor Tadea Garciacutea de la Huerta titulado Relacioacuten de la inundacioacuten que hizo el riacuteo Mapocho de la ciudad de Santiago de Chile en el monasterio de Carmelitas titular de San Rafael el diacutea 16 de junio de 1783 se trata de un poema tipo romance escrito en versos octosilaacutebicos y que da cuenta de lo sucedido ese diacutea en el convento (Resentildea de la literatura del reino de Chile de Joseacute Promis Eddie Morales Pintildea httpwwwupaclpublicaciones2002literatura_promishtm)

149 Son frecuentes las faltas ortograacuteficas Una de ellas es el uso constante del seseo La ausencia de acentua-cioacuten y puntuacioacuten exceptuando alguacuten punto o coma arbitrario no seguido casi nunca de mayuacutescula inicial lo mismo que el uso igualmente aribitrario de la h o de b v r q g j m n x etc No olvidemos de la misma forma la laxitud linguumliacutestica existente en el siglo XVII (no sabemos a queacute parte de eacuteste pertenece el manuscrito) asiacute como la joven edad de la monja

171ESPANtildeOLAS DE ULTRAMAR EN LA HISTORIA Y EN LA LITERATURA

Los versos del presente manuscrito poseen la misma fuerza que tiene su prosa Con una estructura estroacutefica indefinida estaacuten aparentemente corregidos por alguien que tu-vo la oportunidad de conocer personalmente a la autora Muy probablemente se trate del padre al que hace referencia al principio del primer manuscrito laquoMandame el Pd que le declare en que consiste un verdadero amor a Diosraquo a continuacioacuten continuacutea con su caracteriacutestica humildad laquo[O]bedesere y dire lo q Dios me inspire segun mi rudesa y simplisidadraquo (Mss 12959 26) En cuanto a la fuerza pasional de esta joven observamos con cierta tristeza coacutemo aparece sublimada en sus escritos con toda la enegiacutea de una joven mujer llena de intensidad y vida pero encerrada en los liacutemites de un convento Veamos un ejemplo en donde responde el Alma en los siguientes versos

O mi enamorado Jesus O mi dulse y tierno amanteO alegria de los sielos O dulse Jesus amable

(Toda Sentildeor me derrito toda Sentildeor me desagoy quiero vivir por ti ea sentildeor abrasadme) [Tachado en el original]

Toda Sentildeor me derrito toda Sentildeor me desagoy quiero morir por vos ea Sentildeor que ya acabo

Ya tus amores me llaman ya tus perfumes me traencon suspiros y agonias Sentildeor hasta que te alcanse

O mi Jesus amoroso no puedo mas dilatarmeya la pasiensia me falta dulse Jesus abrasadme

(No puedo vivir sin vos no puedo mas dilatarmeya la pasiensia me falta dulse) [Tachado en el original]

No puedo vivir sin vos mi dulse Jesus amablepues me teneis echisada siendo mi esposo y mi Padre

Ay que me abraso Ay que me quemo del Amor deJesus nasareno como no tocan y tantildeen a fuego150

Estos versos llenos de arrebato sublimado conectan con toda la tradicioacuten miacutestica es-pantildeola que se remonta a Ramoacuten Llul y que culmina en el maacutes universal de nuestros

150 En toda la fuerza y simbologiacutea del amor maacutes iacutentimo del maacutes alto y sublime placer de la unioacuten de los amantes tal como lo encontramos en el Cantar de los Cantares y en San Juan de la Cruz Leemos en la Biblia

Ya me he quitado la tuacutenica iquestCoacutemo volver a vestirme Ya me he lavado los pies iquestCoacutemo volver a ensuciarlosMi amado metioacute su mano por el agujero (de la llave) y mis entrantildeas se estremecieron por eacutel Me levanteacute para abrir a mi amado Mis manos destilaron mirra y mis dedos mirra exquisita en el pestillo de la cerradura (5 3-5)

Nos ocurre lo mismo con San Juan de la Cruz en su insuperable poema laquoLlama de amor vivaraquo

iexclOh cauterio suaveiexclOh regalada llagaiexclOh mano blanda iexclOh toque delicadoque a vida eterna sabey toda deuda pagaMatando muerte en vida la has trocado

172 JUAN FRANCISCO MAURA

miacutesticos San Juan de la Cruz Esta tradicioacuten se extiende hasta finales del siglo XVII esto es hasta los finales del Barroco siendo un poco maacutes tardiacuteo en la Ameacuterica espantildeola Sin tener como propoacutesito discutir en el presente trabajo a queacute corriente miacutestica pertenece la obra de Sor Nada es necesario resaltar no obstante el hecho de que estaacute escrito por una mujer y ademaacutes de tierna edad El manuscrito 12959 Caja 26 termina con estas pa-labras laquo[T]odas estas boverias escrivi por entretenimiento siendo resien profesa en la religion Sor Nadaraquo Mas no por la juventud de su autora los escritos dejan de tener lo-gradas metaacuteforas imaacutegenes y siacutembolos sacados de la naturaleza La alegoriacutea de la unioacuten matrimonial poseeacute el fuego liacuterico de la maacutes apasionada de las relaciones amorosas vivi-ficada por perfumes flores insectos animales escarchas nieves o abrojos Por lo tanto aunque la narracioacuten destile cierta ingenuidad no carece por ello de un vocabulario rico con el sabor popular de la poesiacutea de los cancioneros y romances de tradicioacuten renacen-tista No ha sido otra mi intencioacuten que la de rescatar del olvido unos escritos en prosa y en verso llenos de frescura y espontaneidad que nos muestran la pasioacuten con que la joven novicia se laquoentrega en cuerpo y almaraquo a los menesteres de su profesioacuten guiada por un padre espiritual en esos primeros antildeos de formacioacuten Esta ha sido la razoacuten por la que presento a continuacioacuten el citado manuscrito en su totalidad

Sor Nada (Mss 1295928)

laquoEsplicacion sobre en que consiste la paz del AlmaraquolaquoQuartillas a un Alma que padece soledad interiorraquo

[7 hojas utiles en 4ordm letra del siglo XVII]

+

Esplicacion sobre en que consiste la paz del Alma

Pareseme segun mi rudo entender que la verdadera paz del Alma con-siste en una muy pura y buena consiencia en un corason liso y bien intensionado en una verdadera rectitud de espiritu en el qual el Alma procura bolar a Dios sin jamas detenerse a respetos umanos ni reparar en que me diran ni de que me censuraran sino me apresuro a seguir a unos entenderes y pareseres dorados en los quales pretende el mundo engantildear y ensuciar si se puede la puresa de un corason unicamente de Dios y de su Santa ley y se lo conserva cristalino con la divina asis-tencia de la gracia y comprendido de su Amor y temor siguiendo la luz divina de tan amante Sentildeor Dios y ombre verdadero con que este ilustrado corason ni se altera ni se mueve por los disfrasses dorados que ase el mundo y sus moradores mayormente con falssas amistades aunque con ellos muestre buena intension Con la misma grasia y luz de Dios conose el buen corason estos disfrasses que le ase el mundo y se retira de todo con espiritu y valor esto sin la menor alterasion sino que en suma paz se retira a buscar a Dios dentro de su mismo corason

173ESPANtildeOLAS DE ULTRAMAR EN LA HISTORIA Y EN LA LITERATURA

y se abrasa con su pura verdad en la qual se le descubren mil interio-res secretos tan solidos puros y verdaderos que la misma Alma queda abismada y de puro grandes no los puede bien comprender ni esplicar pero estos mismos secretos divinos le sirven de espuelas para no solo correr sino bolar con pies de plumas en seguimiento de su bien ama-do Jesus y como este soberano Sentildeor es tan amante de sus espossas las Almas luego que la ve bolar con pies de plumas la sale al encuen-tro en despoblado campo que se deve de llamar Campo de Amor de Dios y el mismo Sentildeor se viene a las manos por ser Dios que nos ama con Amor infinito de Padre benigno y amoroso con que asiendose en contra deso este divino enamorado en lo interyor de el Alma que le busca con ansias de servirle y amarle y en aquella soledad traban una conversasion amorosa y sensilla como la pluma simple de quien esto escrive

Divino enquentroDios y el Alma en la soledad

O Soberano Principe de la paz dise el Alma tus perfumes me traen a ti bolando porque alla en el mundo y sus valedores me pretendian engantildear y entretenerme con pegaminossas amistades que facilmen-te me pudieran envenenar y matarme apartandome de ti Mi dulse Jesus amable mi Redentor Soberano que con tantas ansias me sales al enquentro como siervo [ciervo] erido de mis Amores los quales tu Amor me ofrese para que con tu mismo Amor te ame y te sirva en paz sin perturbarme ni contristarme ni cansarme de padeser pasando si se ofrese por escarchas nieves espinas ni abrojos ni por otros diverssos trabajos ni piedras de contradision que tu me puedes permitir pues por mas que el mar se levante con sus ferosses olas contra mi ni piedras se me tiren al rostro en todo Sentildeor me quieres con serenidad pasifica sin la menor perturbasion Todo Sentildeor quieres que lo tome con Serenidad de espiritu y asi vengo a ti bolando para que mejor me ensentildees a vivir segun las leyes de tu noble condision que me son muy agradables por mas que el mundo me las despresie por segir sus vanidades y torsidas intensiones con apariensias de bien y con este engantildeo y bien me quie-ro mas a mi que no a mi proximo veo que segun mi pareser se pierden muchas Almas y tambien de aquellos que se depresian y pasan por muy espirituales Con que me paresen pocos los que llegan a padeser con desnudes151 de espiritu por tu purisimo Amor y me parese essas se quedan muy atrasadas en la virtud por el peligro de bolver muy atras el paso de modo que se pueden despentildear y pereser en su misma desgra-sia ya por soberbia o por otras enfermedades que se les pega al corason y asi lo pasan como siegos ignorantes sin advertir en sus peligros

151 La letra en cursiva es miacutea

174 JUAN FRANCISCO MAURA

este aquerdo Sentildeor y otros que tu verdad me ensentildea me ase venir uyendo de las paredes del mundo y me vengo a ti Dios mio bolando con las dos Alas del Amor y temor que tu mismo Amor me ofrese tan de gracia y tan de grado que no se duentildeo mio con que lo responder a tan soberano beneficio y finesa de tus entrantildeas de Amorvengo Sentildeor y esposo mio unicamente a descansar en ti pues los peli-gros del camino me an puesto en mucho sobresalto temiendo el per-derte y sin ti perderme para siempre por una eternidad sin fin pues deseo amado mio ganarme ganandote a ti y vivir en ti aora en vida y despues eternamente y estos cuidados me traen fatigada molida y cansada y no podre tener alivio y descanso sino viendome entre tus brassos aunque sea estando en cruz pues ese es el fin de mis deseos vivir y morir en ti ablame mi cordero manso y ensentildeame a que ver-daderamente te ame como fiel esposa ea mi caro amigo dame la ma-no pues sabes Amor mio que en mi no ay mano sin tu misma mano y asi mi Dios y Sentildeor mi Principe Soberano con umilde rendimiento y deseos de alcansarte te suplico me des la mano y me consueles en estos mis trabajos Deseo Sentildeor vivir en paz y los malos amores de mi Naturaleza flaca no me dejan detentar y no quieren por mi desgrasia atropellar con las leyes de tu Amor ni quisiera perturbar mi corason quando me veo con un torvellino de olas y contratiempos que a menu-do me suelen sercar pero si tu Sentildeor me das la mano nada temo sino que me aseguro y vivire en paz sin que me fatiguen los contratiempos pues mi mano en la tuya y mi espiritu en el tuyo por mas borrascas que me envistan no seran bastantes para rendir mi voluntad a la suya bien si para pronunsiar un fiat que resuene bien atras en tus oidos y que en medio de mis fatigas me ponga a cantar tus divinas misericor-dias hea Sentildeor ya pretendo serrar mis labios por no desir mas bove-rias y deseo Sentildeor oir tus palabras de vida eterna abla Sentildeor que tu sierva oye con atension y cuydado mira mi Dios que se me ase tarde y espero con prisa deseando saborearme y aprovecharme de los ecos de tu Santa dotrina pues todas tus palabras saben a eterna vida callen pues mis sentidos y potensias y todo se ponga en paz pues mi dulse y soberano Sentildeor no se escusara de ablar me aun que en mudo silensio hea mi gran Prinsipe de la paz ablame que tus puros amores me traen perdida por estos asperos montes y mis cortos pasos no te pueden dar alcanse mirame mi Dios a tus pies postrada como un vil gusano y me-nor ormiga de la tierraabla Jesus y dise a su esposa el Alma querida esposa mia que me pides y por que te muestras tan fatigada y mal sufrida no vives como corde-rita del campo buscando de mis pechos el sustancial pasto mi Amor no te sustenta y mi grasia te promete eterna vida pues dime amada de que te fatigas y te muestras mal sufrida mira que te amo con Amor de padre y con Amor de esposo el mas fino y puro enamorado que no tan solo me presio de darte mi mano sino tambien todo mi cuerpo y

175ESPANtildeOLAS DE ULTRAMAR EN LA HISTORIA Y EN LA LITERATURA

sangre para que con mi pan de vida te sustentes y te regales a tus an-churas y que con mi propio espiritu vivas en paz como tu lo deseas y que mis amores sean unico alivio en tus trabajos en esta mortal vida pues si esto es asi y sabes que muero por darte vida dime esposa mia de que te fatigas Dame querida tus brassos y dime si me amas como yo te amoResponde el Alma152 Tu mi Dios sabes si yo te amo pues de mi solo se que mis deseos y ansias buelan a ti mas no alcanso a saber si te amo como tu de-seas ser amado y como desconfio tanto de mi y de mis prosederes falssos temo Dios mio perderme y perderte y asi Sentildeor pues no desechas mis Amores y te muestras tan fino en amarme te pido me ensentildees a vivir segun las leyes de tu pura verdad y fina condisionhija mia dise Dios la prueva de un verdadero Amor consiste en sufrir callar y padeser por mi unico Amor y en todo seguir mis pasos sin ja-mas retroseder por mas fragoso que se muestre el camino pues nunca seran tantas las espinas las escarchas ni las nieves ni los vientos bo-rrascosos que te se ofrescan pasar por mi Amor como los que mi tierno y desinteresado Amor paso por ti y siempre con mis pies descalssos y asi hija y esposa mia muestrate costante en seguir lo perfecto de mis passos pues mi braso fuerte sera en ti y peleara por ti y te sera el todo en tus nesesidades y mi Amor te convertira en dulse y suave lo amargo y molesto a la condision de la carrne

Responde el Alma

O mi enamorado Jesus O mi dulse y tierno amanteO alegria de los sielos O dulse Jesus amable

(Toda Sentildeor me derrito toda Sentildeor me desagoy quiero vivir por ti ea sentildeor abrasadme) [Tachado en el original]

Toda Sentildeor me derrito toda Sentildeor me desagoy quiero morir por vos ea Sentildeor que ya acabo

Ya tus amores me llaman ya tus perfumes me traencon suspiros y agonias Sentildeor asta que te alcanse

O mi Jesus amoroso no puedo mas dilatarmeya la pasiensia me falta dulse Jesus abrasadme

(No puedo vivir sin vos no puedo mas dilatarmeya la pasiensia me falta dulse) [Tachado en el original]

No puedo vivir sin vos mi dulse Jesus amablepues me teneis echisada siendo mi esposo y mi Padre

152 La aparicioacuten de una mayuacutescula al principio de una oracioacuten es algo totalmente arbitrario en este ma-nuscrito dada la libertad ortograacutefica de la autora Como se puede observar en la mayor parte de las veces no es el caso

176 JUAN FRANCISCO MAURA

Ay que me abraso Ay que me quemo del Amor deJesus nasareno como no tocan y tantildeen a fuego

Responde Jesus Hija mia tus simples vozes oygo y aunque resuenan bien a mis oidos pero te deseo mas mansa y pasifica en tus fervores ya sabes que no siempre as de vivir en mantillas ni a los pechos de tu Madre por que es rason que padescas con espiritu fuerte como mu-jer valerosa por que a una esposa del Rey soberano y prinsipe de la paz no le estan bien chiquerias ni fervores de nintildea malcriada y ya es ora que la destete su Madre la Naturaleza y que empesando su nueva vida camine con el favor de mi grasia sigiendo mis passos de eterna vida esto con sus pies descalssos segun mis leyes de Amor puro y desinteresado lo tienen ordenado153 y vivir en paz como lo deje en-cargado a mis apostoles Santos repitiendoles varias vezes Vivir en pas y caridad esto es un vivir en Dios y Dios en el Alma y asi hija mia el Alma que vive en paz vive en mi Como mis cortesanos en el cielo y pues me pides que te ensentildee a vivir segun las leyes de mi condision Repito el desir que te debes mostrar sufrida en todo tiempo y estado sin permitir en tu corason que ni aun los fervores se adelanten con estremos ni ademanes sino atiende y aprende de mi purisima Madre pues siempre la veras si bien lo consideras que mientras vivio en el mundo en todos sus trabajos se mostro firme fuerte costante como piedra diamante Pues mirandome nintildeo entre sus brasos desnudo en el pesebre desnudo y crusificado en los brassos de una cruz En estos y otros passos no se mudo su rostro sino que en suma serenidad y pasifico corason toda se sacrificaba enteramente en los brassos de mi Amor y rendido su corason y voluntad en la de mi eterno Padre por ejemplo te la doy y deseo que aprendas de sus nobles calidades pues te aseguro carisima que las leyes de mi condision y pura verdad todo lo allaras enserrado en el corason de mi purisima Madre sedle fiel y descansaras en paz

+

Quartillas a un alma que padese soledad interior

1Un Alma afligida y tristese ve en un campo desiertay en el su esposo la tieneAtormentada y sedienta

153 Es a traveacutes de estas liacuteneas lo que hace suponer que la autora de este diaacutelogo amoroso entre el Alma y Je-suacutes es novicia esto es laquoque estaacute empesando su nueva vidaraquo En las mismas liacuteneas una vez maacutes se hace alusioacuten al laquodesteteraquo de su vida civil laquoa una esposa del Rey soberano y principe de la paz no le estan bien chiquerias ni fervores de nintildea malcriada y ya es ora que la destete su Madre la naturalesaraquo (fol 5)

177ESPANtildeOLAS DE ULTRAMAR EN LA HISTORIA Y EN LA LITERATURA

2Pendiente se ve en el AyreSolo un hilo la sustentasin tocar el pie en el sueloporque del no tome tierra

3Mirandola esta yto a ytoaquel sol que la atraviesay la enviste con sus rayosmas ella no pestantildeea

4Como sigarra padese y como a tal se atormentabatiendo sus mismas Alasy el corason se atraviesa

5Con penas sustos temoresquando se mira assi mesmasin tener valor en nadaporque es la misma flaquesa

6Pero el Amor de su esposotoda su atension le llevay la pone en un abismopero cubierto en tiniebla

7Desea dar algun bueloy subir con ligeresapero se mira travadacon una fuerte cadena

8Clama suspira y padeseMas del todo se sujetaRindiendo su voluntadA la divina clemencia

9Los enemigos del AlmaCruelmente le asen guerray ella aunque firme y constantelos reselos la atormentan

178 JUAN FRANCISCO MAURA

10de todos modos padeseaunque gosa la asistensiadel divino esposo amadoque en su interior se recrea

11Solo de verla penary con verla tan serenadise resibe mil gustosde su sigarra pequentildea

12Le sabe el mundo a mil yelesy su trato le atormentaviendo en el mil falsedadesque todas saben a tierra

13Para poderse librardeja de correr y buelacon las Alas del Amory el mismo Amor se la lleva

Una vida dedicada a un amor divino un amor que le haraacute llenar un buen nuacutemero de cuartillas dedicadas a tan alta empresa Se desconoce si la vocacioacuten de Sor Nada con-tinuoacute con tanta intensidad el resto de sus diacuteas Ciertamente la vida en el covento no era faacutecil En algunos casos la experiencia era traumaacutetica incluso fatal para algunas de las adolescentes de la Ameacuterica Espantildeola Las reglas del claustro eran severas por varias razones Estas joacutevenes si no teniacutean el permiso de la superiora no podiacutean recibir visitas no podiacutean volver a sus casas su correspondencia era censuraba y no podiacutean salir del periacutemetro conventual Igualmente se levantaban antes del amanecer para oir misa tra-bajaban el resto del diacutea y lo maacutes interesante es que muchas veces esta vida era aceptada por muchas

Page 28: Tercera parte: Mujeres en la vida intelectual - …parnaseo.uv.es/Editorial/Maura/TerceraParte.pdf · La Biblia, por su parte, hace repetidas menciones de la mujer y sobre el comporta-

158 JUAN FRANCISCO MAURA

El historiador argentino Germaacuten Arciniegas recoge un pasaje ilustrativo de lo men-cionado anteriormente pero trasladado al ambiente de la colonia diciendo que incluso en poblaciones pequentildeas como Santa Fe con poco maacutes de un convento y una ermita la fragilidad de la carne enredaba a frailes soldados y virreyes por igual laquoEl buen So-liacutes que murioacute en olor de santidad con la cabeza reclinada sobre un par de ladrillos y en saya de franciscano cruzaba en las noches el solar de su palacio para ir a besar a la Marichuelaraquo (118-19)

Arciniegas recoge tambieacuten un suceso aparecido en el diario de Lima en 1667 que no tuvo que ser extraordinario durante los primeros antildeos de la colonia laquoEl fraile carmelita mdashGrande hereje y siendo sacerdote deciacutea misa gran perro lujurioso deshonesto que relatando sus maldades dijo que en cierta ciudad habiacutea conocido carnalmente a maacutes de trescientas y sesenta mujeres y en un convento de monjas habiacutea cometido muchos sacrilegios Este lo trujeron preso de Buenos Aires por Chileraquo (119)

Las controversias de la iglesia moderna sobre las relaciones que los eclesiaacutesticos de-ben tener con el sexo femenino parece que no han encontrado todaviacutea respuesta Sigue existiendo miedo y recelo a que la mujer comparta no soacutelo poder en la jerarquiacutea de la iglesiacutea sino en la vida privada de los miembros de la institucioacuten En la Nueva Espantildea el primer obispo de Meacutexico Juan de Zumaacuterraga viendo en la mujer un ser de tentacioacuten irresistible prohibioacute terminantemente la presencia de eacutestas en su casa Ni siquiera para su limpieza y aseo El franciscano Juan de Torquemada se refiere a este comportamien-to como una de las virtudes del popular obispo

Fue este benditiacutesimo prelado muy amigo de la virtud y de virtuosos y aceacuterrimo reprehendedor de vicios y viciosos y tan enemigo de la ociosidad que no permitiriacutea que alguno de su casa estuviese ocioso fue amiciacutesimo de la limpieza por lo cual jamaacutes consintioacute que mujer alguna entrase en su casa aunque fuese necesaria al servicio de ella ni nunca consintioacute que por alguna ocasioacuten subiese mujer a lo alto y aposentos de ella antes lo teniacutea todo cerrado como un monasterio porque sabiacutea (como quien tambieacuten sabiacutea) que la ocasioacuten suele derribar los maacutes fuertes y robustos corazones (450 lib 20 cap 31)

No fueron uacutenicamente miembros de la iglesia catoacutelica los que valoraron la lucha con-tra la tentacioacuten siguiendo al pie de la letra el crudeliacutesimo refraacuten laquoentre santa y santo pared de cal y cantoraquo Se tienen algunas noticias de la vida social de los primeros tiem-pos de la colonia En estos documentos se puede observar coacutemo no distaban mucho las oacuterdenes que se dictaban en la metroacutepoli y las que se llevaban a cabo en la Nueva Espantildea La vida social tanto de damas como de algunos miembros de la iglesia de las colonias era maacutes laquorelajadaraquo de lo que las normas permitiacutean Gracias a la informacioacuten ofrecida por Manuel Romero de Terreros disponemos de los nombres de las primeras virreinas

Las esposas de los primeros cinco Virreyes Don Antonio de Mendoza Don Luis de Velasco Don Gastoacuten de Peralta Don Martiacuten Enriacutequez de Almanza y Don Lorenzo Suaacuterez de Mendoza Conde de la Coruntildea fueron respectivamente Dontildea Caterina de Vargas Dontildea Ana de Cas-tilla y Mendoza hija de Don Diego de Castilla Sentildeor de Gor y Caba-

159ESPANtildeOLAS DE ULTRAMAR EN LA HISTORIA Y EN LA LITERATURA

llerizo de Carlos V Dontildea Leonor de Vieo Dontildea Mariacutea Manrique hija del Marqueacutes de Aguilar y Dontildea Catalina de la Cerda hija del segundo Duque de Medinaceli (Romero 2)

Existen noticias concretas de la seacuteptima virreina de la Nueva Espantildea (1586) dontildea Blanca de Velasco marquesa de Villamanrique En ellas destaca lo anteriormente men-cionado sobre la falta de tolerancia existente en aquellos tiempos difiacutecilmente com-prensible si no fuera por fragmentos esporaacutedicos conservados sobre la vida colonial en la Nueva Espantildea En la siguiente Relacioacuten hecha por autores anoacutenimos sobre la visita que hizo Fray Alonso Ponce Comisario General de la Orden Seraacutefica a las provincias de la Nueva Espantildea se mencionan las eneacutergicas medidas que con los miembros de su orden en su opinioacuten de moral laquomuy relajadaraquo tomoacute este religioso Tambieacuten aparecen mencionadas sus relaciones con la Virreina

Captoacutese ademaacutes la enemistad del gobernante y de la Virreina Dontildea Blanca de Velasco hija del cuarto Conde de Nieva sentildeora seguacuten pare-ce de conducta ligera y caraacutecter maacutes que dominante laquoPor este mismo tiempo (septiembre de 1586) fueron el Virey y la Vireyna a holgarse y recrearse en la cibdad de Xochimilco Posoacute con toda su casa dentro de nuestro convento en un dormitorio deacutel y detuacutevose alliacute siete u ocho diacuteas en que los indios les hicieron grandes fiestas aunque les costaron caras porque en una dellas murieron dos o tres dellos con un tiro que se disparoacute y reventoacute y al principal indio de aquella cibdad hirieron muy malraquo (Romero 3-4)

A pesar del riacutegido control eclesiaacutestico y civil que habiacutea en la Nueva Espantildea existieron tambieacuten pareacutentesis en los que incluso miembros de la iglesia y mujeres mdashhumanos al fin y al cabomdash pudieron disfrutar de algunos momentos de regocijo y alegriacutea Con-tinuando con la cita anterior el mismo autor se queja del laquoexcesoraquo de libertad en los frailes que se suponiacutea que teniacutean que profesar una extremada pobreza y no digamos castidad En primer lugar se describen pormenorizadamente la abundancia en el tipo y cantidad de comida de toda clase dulces y vino que se consumieron con largueza y generosidad durante aquellas fiestas Pero lo que maacutes indigna al autor (o autores) fue que llegasen a entrar mujeres en el convento

y aunque todo esto es malo delante de Dios y delante de los hom-bres lo que maacutes mal parecioacute y de que todo el mundo tuvo que mur-murar fueacute la demasiada libertad rotura y disolucioacuten que hubo en en-trar y estar muy de propoacutesito mujeres no soacutelo la Vireyna y las suyas sino otras muchas dentro del dicho convento y andar por las celdas como si fuese cosa profana y como si no hubiera breve apostoacutelico que soacute graves penas y censuras prohibe estas entradas y como si a los frai-les no los comprendiera el dicho breve por admitirlas y no estuviera asiacute declarado y mandado por nuestros estatutos generales de Toledo (Romero 4-5)

La preocupacioacuten por las laquotentaciones de la carneraquo fuera del matrimonio siempre es-tuvo en la mente de los religiosos espantildeoles asiacute como de otras nacionalidades y reli-

160 JUAN FRANCISCO MAURA

giones que intentaban vanamente erradicar algo tan intriacutenseco al ser humano como a cualquier otra especie animal Esta preocupacioacuten se acentuoacute mucho maacutes en el Nuevo Mundo donde muchas sociedades tribales no veiacutean a la mujer como parte integrante de su propiedad privada La razoacuten es obviamente socioloacutegica y ha existido desde el principio de los tiempos en las civilizaciones maacutes primitivas laquoNo desearaacutes a la mujer del proacutejimoraquo El quebrantar este precepto equivaldriacutea a desestabilizar desde su base a la sociedad judeo-cristiana fundamentada en la familia Las penas aplicadas en estas transgresiones seraacuten lo suficientemente severas como para marginar socialmente mdashen el mejor de los casosmdash a aquellos que las pongan en praacutectica Siendo la mujer la encar-gada por la naturaleza de trasmitir la descendencia de la especie su libertad sexual se veraacute limitada por el peligro de quedar embarazada cada vez que ignore tal elemental precepto140

Primeras escritoras del Nuevo Mundo

Contra cuerdos y contra locos estaacute obligado cualquier caballero andante a volver por la honra de las mujeres cualesquiera que sean Cuanto maacutes por las reinas de tan alta guisa y pro como fue la reina Madaacutesima a quien yo tengo particular aficioacuten por sus buenas partes porque fuera de haber sido fermosa ademaacutes fue muy prudente y muy sufrida en sus calamidades que las tuvo muchas (Cervantes Don Quijote)

Fueron varias las escritoras que durante los siglos XVI y XVII tuvieron una relacioacuten di-recta o indirecta con el Nuevo Mundo Muchas de ellas eligieron la vida monaacutestica mdashen algunos casos como refugio huyendo de sus maridosmdash uacutenica salida en una estructura social en donde no eran muchas las opciones especialmente en una eacutepoca donde el fac-tor religioso pesaba casi tanto como el econoacutemico pero sobre todo para dedicarse a una vida espiritual difiacutecilmente alcanzable en otras circunstancias Mariloacute Vigil apunta que las monjas que lo eran por su propia voluntad ademaacutes de tener inquietudes religiosas tambieacuten las teniacutean intelectuales como es el caso de la escritora miacutestica espantildeola Santa Teresa de Jesuacutes (1515-1582) que ademaacutes de tener una de las vidas maacutes interesantes que se conozcan supo sacar tiempo para escribir las maacutes bellas manifestaciones de la poesiacutea liacuterica y sobre todo de la prosa castellana (Vigil 237-38) Cada una de estas mujeres de-dicadas a la vida literaria y espiritual de su tiempo se merece muchiacutesimo maacutes espacio del que se les pueda ofrecer en estas pocas liacuteneas No obstante con estas pasajeras men-

140 Aunque afortunadamente las cosas han cambiado para la mujer no se debe dejar de mencionar la can-tidad de abusos sexuales de la que es viacutectima en la sociedad moderna

161ESPANtildeOLAS DE ULTRAMAR EN LA HISTORIA Y EN LA LITERATURA

ciones se espera al menos incluirlas y poder despertar el suficiente intereacutes para que sus vidas y sus obras no sigan sumergidas en las simas del olvido Para que estas mujeres de la iglesia pudiesen satisfacer su curiosidad cognoscitiva era necesario romper todas aquellas barreras que supusiesen un estorbo o una restriccioacuten a la hora de investigar consultar o hablar con cualquier persona religiosa de cualquier orden o secular ya fue-se obispo o cleacuterigo Las posiciones intelectuales entre las diferentes oacuterdenes religiosas fueron muy dispares como bien es sabido No eran iguales los planteamientos teoloacute-gicos de los dominicos que los de los franciscanos o los de los carmelitas que los de los agustinos o jesuitas Era necesario por lo tanto tener acceso a estas fuentes de informa-cioacuten para poder constrastar las diferencias y hacer valoraciones propias (Vigil 237-38) El escritor espantildeol Caro Baroja destaca el caraacutecter enciclopeacutedico del catolicismo donde se han integrado corrientes y posturas muy dispares que a traveacutes del diaacutelogo daban cierto espacio al creyente con maacutes curiosidad intelectual para que este pudiese compa-rar y valorar las diferentes opciones que se le ofreciacutean (Vigil 237-38)

Varias de estas mujeres intelectuales fueron hijas de conquistadores que aunque na-cidas en suelo americano seguiacutean expresaacutendose en la lengua de sus padres con no me-nos fuerza que sus contemporaacuteneas peninsulares Es cierto que existieron numerosas escritoras en el Nuevo Mundo durante el siglo XVIII algunas dedicadas incluso al estudio de las matemaacuteticas como la mexicana Dontildea Francisca Gonzaga y Castillo Pero para limitar el presente trabajo a los siglos XVI y XVII uacutenicamente se incluiraacuten ejemplos de estos dos siglos

La peruana Josefa de Alarcoacuten publicoacute en 1648 unas liras dedicadas a las Exequias del Priacutencipe Baltasar Carlos

Cifro en capilla breveEl tribunal de la Magestad maacutes graveEn fe de lo que debeA Carlos que en dos mundos no cabe141

El caso de Sor Jeroacutenima de la Asuncioacuten es muy interesante una mujer que tuvo la oportunidad de viajar a Meacutexico y posteriormente a las Filipinas para cumplir con las mi-siones que le habiacutean sido encomendadas por su orden Nacida en Toledo en 1555 en el seno de una noble y acaudalada familia estuvo destinada a recorrer el mundo ofrecien-do sus servicios a todos los necesitados distinguieacutendose por su ardiente caridad laquovien-do que los galeotes eran tratados con dureza excesiva sobre todo cuando los llevaban de un pueblo a otro procuroacute aliviar las penas de aquellos desgraciados y lo consiguioacute en parteraquo (Serrano y Sanz 268 65) Hija del licenciado e ilustre jurista Pedro Garciacutea Yaacute-ntildeez y de dontildea Catalina de la Fuente ingresoacute contra su voluntad en el monasterio de las Clarisas de Santa Isabel de los Reyes (Toledo) el 5 de agosto de 1570 (Trevintildeo 46) hay que decir que eacutesta no seraacute la uacutenica voluntad contra la que tuvo que luchar

Sor Jeroacutenima se embarcoacute para Meacutexico y de alliacute partioacute hacia Manila junto con siete compantildeeras en el famoso laquoGaleoacuten de Manilaraquo que saliacutea anualmente del puerto mexi-cano de Acapulco Su viaje a las Filipinas duroacute un antildeo y tres meses desde su salida de Espantildea tiempo en el que demostroacute un gran valor y determinacioacuten por el soacutelo hecho de

141 Manuel Serrano y Sanz Apuntes para una biblioteca de escritoras espantildeolas desde el antildeo 1401 al 1833 vols 268 269 270 271 Biblioteca de Autores Espantildeoles (Madrid Atlas 1975) 268 19

162 JUAN FRANCISCO MAURA

embarcarse en tan precarias naves Fue la primera misionera de Oceaniacutea muriendo en Manila en 1621 Alliacute fundoacute el monasterio de Santa Clara que perviviriacutea hasta ser bom-bardeado en la Segunda Guerra Mundial (Trevintildeo 47) Escribioacute su Vida donde trata de la fundacioacuten del convento y de todas las tribulaciones mdashllegoacute a ser excomulgadamdash y satisfacciones que una vida dedicada a una causa justa proporciona Tambieacuten escribioacute una obra de caraacutecter filosoacutefico-teoloacutegico titulada Carta de marear en el mar del mundo nombre alegoacuterico que da cuenta de la enorme distancia recorrida a traveacutes del laquomar del espiacuterituraquo por sor Jeroacutenima He aquiacute algunos de sus versos de caraacutecter religioso

Vuestra soy para vos naciacuteiquestQueacute mandaacuteis hacer de miacute Inaccesible grandezaEterna Sabiduriacuteay bondad del alma miacuteaDios un ser poder y Altezamirad la suma pobrezade eacutesta que se ofrece aquiacuteiquestQueacute mandaacuteis hacer de miacute (Serrano y Sanz 268 66)

Ya en Meacutexico tenemos otro ejemplo de una mujer dedicada por completo a Dios y al estudio y composicioacuten de obras de caraacutecter teoloacutegico Dontildea Ana Mariacutea del Costa-do de Cristo nacida en la ciudad de Tlaxcala hacia el antildeo 1650 Tomoacute la orden de San Francisco para consagrarse a las labores de su orden y a la escritura Se dice que con los escritos de Dontildea Ana Mariacutea se podriacutean formar veinte tomos (Serrano y Sanz 268 282) Estas son algunas de sus obras Vida y muerte de Jesucristo Nuestro Sentildeor Vida del Seraacutefico Padre San Francisco de Asiacutes Vida de la iacutenclita Virgen Santa Clara Vida del sutiliacutesimo doctor Juan Duns Escoto

Pero no todas las monjas tuvieron vidas tan dedicadas al estudio y la oracioacuten Loacutegica-mente entre un nuacutemero tan grande de mujeres existioacute de todo y seriacutea un error pensar que todos los conventos femeninos estaban integrados por laquocaacutendidas palomasraquo Una monja en el siglo XVI y XVII teniacutea mucha maacutes fuerza que una mujer ordinaria ya que actuaban en grupo y la entrada a los recintos donde viviacutean estaba permitida solo a mu-jeres Esta situacioacuten las haciacutea mucho maacutes fuertes a todos los niveles que una mujer sola protegida uacutenicamente por su familia laquoLas monjas durante los siglos XVI y XVII lucharon por eludir la clausura y por zafarse del control que los frailes de las secciones masculi-nas de sus congregaciones ejerciacutean sobre ellasraquo (Vigil 230) Soacutelo un antildeo maacutes tarde que dontildea Ana Mariacutea del Costado de Cristo en 1651 y a 12 leguas de Meacutexico nacioacute la sin par Sor Juana Ineacutes de la Cruz hija de don Pedro Manuel de Asbaje natural de Vergara (Vizcaya) y de Dontildea Isabel Ramiacuterez de Santillana hija de espantildeoles (Serrano y Sanz 268 289) Por ser sin lugar a dudas la poeta maacutes importante de su tiempo y probable-mente la maacutes conocida del mundo hispano no profundizaremos en ella Su obra es un canto a la inteligencia y el exponente maacutes destacado de la literatura barroca americana tanto en prosa como en verso Destacareacute simplemente que Sor Juana Ineacutes pese a vivir en un sociedad donde no eran excesivas las libertades concedidas a las mujeres tuvo el caraacutecter y la determinacioacuten de dejarnos las maacutes bellas poesiacuteas amorosas que si bien estuvieron enmarcadas en un ambiente religioso como era de esperar por su condicioacuten

163ESPANtildeOLAS DE ULTRAMAR EN LA HISTORIA Y EN LA LITERATURA

pudieron transcender como unas de las maacutes bellas manifestaciones literarias que hoy en diacutea se conservan Fue su agudeza mental sensibilidad y cultura tal que no fueron suficientes los soacutelidos muros del convento para contener el genio de tan extraordinaria mujer Recordemos sus conocidiacutesimos versos en defensa de las mujeres

Hombres necios que acusaacuteisa la mujer sin razoacutensin ver que sois la ocasioacutende lo mismo que culpaacuteis142

Las metaacuteforas y la delicadeza que emplea en rebatir a su obispo en su laquoRespuesta a sor Filotea de la Cruzraquo no son solamente el epiacutetome del feminismo de su tiempo sino una de las maacutes brillantes manifestaciones del barroco hispano Poesiacutea teatro ensayo y un conocimiento extraordinario de las ciencias claacutesicas de su tiempo hacen de esta mujer un ejemplo extraordinario de las letras universales Ya son cientos los artiacuteculos y libros que se han escrito sobre Sor Juana y no dejan de aparecer tesis doctorales sobre los maacutes diversos temas conectados con la citada autora143 Como nos dice Stephanie Merrim en su documentada obra Early Modern Womenrsquos Writing and Sor Juana Ineacutes de la Cruz

She wrote and published on secular themes as atypical for a nun as human love Her remarkably extensive writings essayed and reenacted most of the (male) poetic dramatic theological and even philosophi-cal discourses of her times in the metropolis making her works a com-pendium of baroque culture in its diversity and syncretism Sor Juana self-creation as a learned women effectively toppled many of the walls in which she was materially enclosed and positioned her within the dynamic world of early modern European culture (xii)

No se debe dejar de mencionar a otras escritoras novohispanas de la eacutepoca que aun-que no fueron tan proliacuteficas y relevantes como Juana Ineacutes de la Cruz dejaron testimo-nio de algunos acontecimientos que tienen intereacutes socioloacutegico o testimonial Este es el caso de Dontildea Mariacutea Estrada Medinilla de igual nombre y apellido que la mujer que acompantildeoacute a las tropas de Corteacutes en su primera entrada a Meacutexico Natural de Meacutexico publicoacute toda su obra a mediados del siglo XVII concentraacutendose principalmente en la lle-gada del Marqueacutes de Villena virrey y capitaacuten general de la Nueva Espantildea a la ciudad de Meacutexico en el antildeo 1640 Escrita en octavas reales la obra trata de las fiestas de toros y cantildeas con que se obsequioacute al citado virrey Fue impresa en Meacutexico en 1641 (Serrano y Sanz 269 402)

Mucho maacutes importante para el presente libro es Dontildea Isabel de Guevara que escribioacute en 1556 la carta en que se expone la ayuda que ofrecieron las mujeres en el descubri-miento y conquista del Riacuteo de la Plata No cabe la menor duda de que esta carta es uno

142 Para una mejor comprensioacuten del caraacutecter de esta excepcional mujer veacutease entre los numeros trabajos publicados Fredo Arias de la Canal Intento de psicoanaacutelisis de Juana Ineacutes y otros ensayos sorjuanistas (Meacutexico Frente de Afirmacioacuten Hispanista 1972) 47

143 Veacuteanse entre otros trabajos Octavio Paz Sor Juana Ineacutes de la Cruz o las trampas de la fe Georgina Sabat de Rivers En busca de Sor Juana Margo Glantz Sor Juana la comparacioacuten y la hipeacuterbole Gerard C Flynn Sor Juana Ineacutes de la Cruz Stephanie Merrim Feminist perspectives on Sor Juana Ineacutes de la Cruz Pamela Kirk Sor Juana Ineacutes de la Cruz religion art and feminism

164 JUAN FRANCISCO MAURA

de los documentos maacutes importantes con que contamos en relacioacuten a la aportacioacuten fe-menina en el proceso de la conquista de Ameacuterica Su importancia viene dada por varios factores Primero es uno de los primeros testimonios mdashsi no el primeromdash en donde se expone abiertamente la indispensable colaboracioacuten de las mujeres en el descubrimien-to y conquista de tierras en el Nuevo Mundo laquoQue si no fuera por ellas todos fueran acabadosraquo En segundo lugar la informacioacuten vertida en estas liacuteneas presenta en parte la manera de pensar de una mujer espantildeola en tales circunstancias Extraordinario tes-timonio de primera mano que nos da una idea de lo que significoacute en muchos casos el valor y entrega constantes de muchas de estas mujeres que auacuten a riesgo de perder sus vidas no dudaron en luchar al lado de los hombres por una causa que consideraban laquocomuacutenraquo

La relevancia histoacuterica de dicha carta hace que merezca ser transcrita en su totali-dad

Carta de dontildea Isabel de Guevara a la princesa gobernadora dontildea Juana exponiendo los trabajos hechos en el descubrimiento y conquista del Riacuteo de la Plata por las mujeres para ayudar a los hombres y pidiendo repartimiento

para su marido Asuncioacuten 2 de julio de 1556

Muy alta y muy poderosa sentildeora

A esta provincia del Riacuteo de la Plata con el primer gobernador de ella don Pedro de Mendoza hemos venido ciertas mujeres entre las cuales ha querido mi ventura que fuese yo la una y como la armada llegase al puerto de Buenos Aires con mil quinientos hombres y les faltase el bastimento fue tamantildea el hambre que a cabo de tres meses murie-ran los mil esta hambre fue tamantildea que ni la de Jerusalem se le puede igualar ni con otra ninguna se puede comparar Vinieron los hombres en tanta flaqueza que todos los trabajos cargaban de las pobres mu-jeres asiacute en lavarles las ropas como en curarles hacerles de comer lo poco que teniacutean limpiarlos hacer centinela rondar los fuegos armar las ballestas cuando algunas veces los indios les veniacutean a dar guerra hasta cometer a poner fuego en los versos y a levantar los soldados los que estaban para ello dar arma por el campo a voces sargentean-do y poniendo en orden los soldados porque en este tiempo como las mujeres nos sustentamos con poca comida no habiacuteamos caiacutedo en tanta flaqueza como los hombres Bien creeraacute V A que fue tanta la so-licitud que tuvieron que si no fuera por ellas todos fueran acabados y si no fuera por la honra de los hombres muchas maacutes cosas escribiera con verdad y los diera a ellos por testigos Esta relacioacuten bien creo que la escribiraacuten a V A maacutes largamente y por eso cesareacute Pasada esta tan peligrosa turbunada determinaron subir el riacuteo arriba asiacute flacos como estaban y en entrada de invierno en dos bergantines los pocos que quedaron vivos y las fatigadas mujeres los curaban y los miraban y les guisaban la comida trayendo la lentildea a cuestas fuera del naviacuteo y animaacutendolos con palabras varoniles que no se dejasen morir que presto dariacutean en tierra de comida metieacutendolos a cuestas en los

165ESPANtildeOLAS DE ULTRAMAR EN LA HISTORIA Y EN LA LITERATURA

bergantines con tanto amor como si fueran sus propios hijos Y como llegamos a una generacioacuten de indios que se llaman tinbues sentildeores de mucho pescado de nuevo los serviacuteamos en buscarles diversos modos de guisados porque no les diese en rostro el pescado a causa de que lo comiacutean sin pan y estaban muy flacos Despueacutes determinaron subir el Paranaacute arriba en demanda de bastimento en el cual viaje pasaron tanto trabajo las desdichadas mujeres milagrosamente quiso Dios que viviesen por ver que en ellas estaba la vida de ellos porque todos los servicios del naviacuteo los tomaban ellas tan a pechos que se teniacutea por afrentada la que menos haciacutea que otra sirviendo de marear la vela y gobernar el naviacuteo y sondar de proa y tomar el remo al soldado que no podiacutea bogar y escotar144 el naviacuteo y poniendo por delante a los soldados que no se desanimasen que para los hombres eran los trabajos verdad es que a estas cosas ellas no eran apremiadas ni las haciacutean de obliga-cioacuten ni las obligaba si solamente la caridad Asiacute llegaron a esta ciudad de la Asuncioacuten que aunque ahora estaacute muy feacutertil de bastimentos en-tonces estaba de ellos muy necesitada que fue necesario que las muje-res volviesen de nuevo a sus trabajos haciendo rosas con sus propias manos rosando y carpiendo y sembrando y recogiendo el bastimento sin ayuda de nadie hasta tanto que los soldados guarecieron de sus fla-quezas y comenzaron a sentildeorear la tierra y adquirir indios e indias de su servicio hasta ponerse en el estado en que ahora estaacute la tierra He querido escribir y traer a la memoria de V A para hacerle saber la ingratitud que conmigo se ha usado en esta tierra porque al presente se repartioacute por la mayor parte de los que hay en ella asiacute de los anti-guos como de los modernos sin que de miacute y de mis trabajos se tuviese ninguna memoria y me dejaron de fuera sin me dar indio ni ninguacuten geacutenero de servicio Mucho me quisiera hallar libre para me ir a presen-tar delante de VA con los servicios que a SM he hecho y los agravios que ahora se me hacen mas no estaacute en mi mano porque estoy casada con un caballero de Sevilla que se llama Pedro de Esquivel que por servir a SM ha sido causa que mis trabajos quedasen tan olvidados y se me renovasen de nuevo porque tres veces le saqueacute el cuchillo de la garganta como allaacute VA sabraacute A que suplico mande me sea dado mi repartimiento perpetuo y en gratificacioacuten de mis servicios [en el origi-nal del AHN Diversos doc 141 dice ademaacutes mande que sea proveydo mi marido de alguacuten cargo conforme a la calidad de su persona pues el de su parte por sus servicios lo merece] lo merece Nuestro sentildeor acre-ciente su Real vida y estado por muy largos antildeos De esta ciudad de la Asuncioacuten y de julio 2 1556 antildeosServidora de V A que sus Reales manos besa

Dontildea Isabel Guevara

144 Sacar agua de un riacuteo acequia o presa

166 JUAN FRANCISCO MAURA

Sobremdash A la muy alta y muy poderosa sentildeora Princesa dontildea Joana Gobernadora de los reinos de Espantildea etc ndash En su Consejo de Indias (Isabel de Guevara 619-21)

Iroacutenicamente la carta teniacutea que llegar a manos de la desdichada heredera del trono de Castilla e hija de los Reyes Catoacutelicos Juana laquola Locaraquo que habiacutea muerto el antildeo an-terior Son profeacuteticas las palabras de esta mujer no soacutelo porque sus hechos personales quedasen en el olvido sino porque incluso se ha borrado la historia de las mujeres en el Nuevo Mundo negando su presencia Por lo menos Isabel Guevara tuvo acceso a una pluma iquestCuaacutentas seriacutean las que ni siquiera sabriacutean escribir

Otra contemporaacutenea fue dontildea Leonor de Iciz que vivioacute durante la segunda mitad del siglo XVI Interesa sobre todo por los sonetos que escribioacute en elogio de Ercilla soldado que participoacute en la conquista de Chile y que se inmortalizoacute con su obra La Araucana (Serrano y Sanz 269 534) Lo mismo hizo Dontildea Bernarda Lintildeaacuten en 1610 autora de otro soneto en memoria del capitaacuten Gaspar Peacuterez de Villagraacute que participoacute en la conquista de Nuevo Meacutexico (Serrano y Sanz 270 14) Los escritos de estas mujeres tratan de de dos de las eacutepicas maacutes dramaacuteticas de la conquista

En el Peruacute y en pleno siglo XVII aparece otra fundadora de conventos Sor Bernardina de Jesuacutes que ademaacutes fue comparada con Santa Teresa por la semejanza de sus laquocartasraquo con las de la santa de Avila Fue fundadora del convento de Tacunga en Quito maacutes tarde destruiacutedo por un terremoto Dice Serrano y Sanz con respecto a su biografiacutea un tanto legendaria que fue carmelita descalza de Lima y hermana de Dontildea Mariacutea Benavides y Esquivel abuela de D Pedro de Peralta Barnuevo (Serrano y Sanz 269 553) Dicen que esta santa se alimentoacute durante treinta antildeos con laquochochos y caacutescaras de naranja hecho tan raro como increiacuteble Cuando fallecioacute reparaban las monjas en ponerle una vara de azucenas porque habiacutea sido casada y aquellas flores aparecieron milagrosamente sobre el cadaacuteverraquo (Serrano y Sanz 269 553)

Otra limentildea del primer cuarto del siglo XVII con reputacioacuten de santa fue Dontildea Luisa Melgarejo En este caso no se trata de una religiosa de oficio sino de la mujer del doctor Juan de Soto La uacutenica diferencia es que dontildea Luisa al parecer teniacutea laquovisiones y reve-lacionesraquo lo que debioacute poner nervioso a maacutes de un miembro del tribunal del laquoSanto Oficioraquo que consideraron sus escritos laquoculpadosraquo De su papel de laquosantaraquo pasa por lo tanto al de laquoposesaraquo o laquoendemoniadaraquo El inquisidor de Lima Gaitaacuten escribioacute un infor-me donde a traveacutes de la opinioacuten puacuteblica y de otras averiguaciones se deciacutea que dontildea Luisa Melgarejo laquomujer santaraquo sabiacutea cuando las almas de los difuntos saliacutean del Purga-torio El diacutea 14 de noviembre de 1623 se decidioacute tomar posesioacuten de todos los cuadernos en los que habiacutea escrito las experiencias de todos sus laquoarrobos suspensiones extasis y revelacionesraquo Estos cuadernos una vez recogidos presentaron toda una serie de al-teraciones borrones adiciones enmiendas incluso diferente letra por lo que despueacutes de haber sido examinados resultaron culpables145 Excelente imaginacioacuten debioacute tener dontildea Luisa Melgarejo la suficiente al parecer para convencer a algunos miembros de la iglesia de que en sus escritos laquohabiacutea algoraquo que mereciacutea la pena Estas cosas ocurriacutean en Lima uno de los centros culturales maacutes importantes de la vida social y poliacutetica en la Ameacuterica espantildeola Lima a comienzos del siglo XVII seguacuten el empadronamiento llevado

145 Serrano y Sanz 270 47 Veacutease J T Medina Historia del tribunal del Santo Oficio de la Inquisicioacuten de Lima (1569-1820) (Santiago Imprenta Gutemberg 1887) Tomo II 34-41

167ESPANtildeOLAS DE ULTRAMAR EN LA HISTORIA Y EN LA LITERATURA

a cabo en 1614 por el marqueacutes de Montesclaros era una ciudad de 25000 habitantes de los que 11000 eran espantildeoles El nuacutemero de religiosos y religiosas llegaba a 1720 (Pittaluga 77)

Se sabe que en la Isla de Santo Domingo durante el siglo XVI nacioacute o al menos resi-dioacute una poeta de ceacutelebre apellido en los aconteceres del Nuevo Mundo Dontildea Elvira de Mendoza de la que se conserva un manuscrito en la Real Academia de la Historia laquoCantares miacuteos que estaacuteis rebeladosraquo Eugenio de Salazar hace un elogio de ella como poeta en un Soneto a la ilustre Poeta y Sentildeora Dontildea Elvira de Mendoza moradora en la ciudad de Santo Domingo (Serrano y Sanz 270 53)

Nacida en Burgos sobre el antildeo 1590 dontildea Luisa de Padilla merece un lugar aparte dentro del grupo de mujeres escritoras de su eacutepoca Por su estilo faacutecil y castizo su no-vedad de pensamientos y su rica erudicioacuten recibioacute el siguiente comentario de Manuel Serrano y Sanz laquoPocas figuras hay en nuestra historia literaria femenil que puedan compararse a esta eminente prosista acaso la maacutes notable de cuantas florecieron en Es-pantildea durante el siglo XVIIraquo (Serrano y Sanz 270 95-96) Este comentario y comparacioacuten deberiacutea ampliarse para que tambieacuten incluyese a laquola historia literaria varonilraquo

Dontildea Luisa fue defensora de la labor que la Inquisicioacuten estaba realizando en la laquolim-piezaraquo de mujeres laquosoldados del demonioraquo que existieron en algunas provincias espa-ntildeolas en aquel tiempo Muchas de las mujeres que combinaban la magia con los po-deres curativos fueron condenadas no solamente por hombres de la Inquisicioacuten sino tambieacuten por mujeres de todas las clases sociales como es el caso de Luisa de Padilla condesa de Aranda En su obra Elogios de la verdad e invectiva contra la mentira preveniacutea contra aquellos que practicaban artes en contra de la religioacuten cristiana La magiacutea negra seguacuten Padilla era la causante de que muriesen casi tantas personas como otras causas naturales habieacutendose descubierto hasta seis mil brujas en Vizcaya y Guipuzcua con-fesando una mujer de un pueblo pequentildeo haber matado con su laquomagiaraquo a ochocientas personas (Perry 31) Eran estos laquomales de ojoraquo y maldiciones seguacuten la autora las causas de que se secasen los pechos de las madres lactantes que se separasen las parejas casa-das y que abortasen las embarazadas (Perry 31)

Si se tiene en cuenta que dontildea Luisa estuvo emparentada con la maacutes rancia aristocra-cia de su tiempo o lo que es lo mismo con algunos de aquellos que en cierta manera dirigiacutean los destinos de Espantildea en aquella eacutepoca (Duques de Lerma Duque de Uceda Marqueacutes de Cueacutellar Conde de Santa Gadea Marqueacutes de Belmonte por citar algunos) se comprenderaacute mejor su identificacioacuten con una institucioacuten que en teoriacutea velaba por la salvaguarda de los valores laquoeternosraquo de una Espantildea destinada a ser la campeona del ca-tolicismo durante los siglos XVI y XVII El padre de dontildea Luisa fue don Martiacuten de Padilla y Manrique extraordinario militar que proboacute su valor contra enemigos moriscos ingle-ses holandeses piratas berberiscos y el renegado genoveacutes Muley Faxad Fue veterano de la batalla de Lepanto donde apresoacute a cuatro galeras y acompantildeoacute con su escuadra a la reina Dontildea Margarita de Austria cuando vino de Geacutenova en 1598 laquoHabiacutea obtenido a 24 de julio de 1587 el tiacutetulo de Conde de Santa Gadea y en 1596 el de Capitaacuten General de la Armada del mar Oceacuteanoraquo (Serrano y Sanz 27095-96)

Por otra parte tambieacuten se sabe que dontildea Luisa participoacute directamente y desde tem-prana edad en la praacutectica de algunas actividades intelectuales como la historia y la arqueologiacutea a la vez que dedicaba su tiempo a virtudes cristianas como la caridad y el socorro de los necesitados (Serrano y Sanz 270 97) Resulta mucho maacutes faacutecil compren-

168 JUAN FRANCISCO MAURA

der la postura ideoloacutegica de esta gran mujer si tienen en cuenta ademaacutes de los factores antes mencionados otros tantos de caraacutecter biograacutefico concernientes a su educacioacuten y matrimonio

Otra escritora fue la mexicana dontildea Mariacutea Casilda Pozo natural de Temestla (Meacutexi-co) Nacida en el mes de abril de 1682 dejoacute escrita su biografiacutea en 16 cuadernos el ma-nuscrito original se encuentra en la biblioteca del colegio de San Gregorio de Meacutexico Fue su confesor el jesuiacuteta Domingo Quiroga que fue quieacuten la incitoacute a escribir su obra (Serrano y Sanz 270 137) Sor Juana de San Antonio aparece a principios del siglo XVII formando parte de un grupo de religiosas espantildeolas que fueron a Manila por la ruta de Meacutexico Ademaacutes de distinguirse por sus cualidades personales su obra interesa por ofrecer informacioacuten testimonial y costumbrista acerca de la forma de vestir de chinos y japoneses (Serrano y Sanz 270 225)

Otra monja esta vez ecuatoriana fue Gertrudis de San Ildefonso Nacida en 1652 profesoacute su vocacioacuten en el convento de Santa Cruz de Quito dejando escrita su vida por mandato de su confesor el padre Martiacuten de la Cruz el cual hizo una biografiacutea laquoen tres gruesos voluacutemenesraquo Gertrudis de San Ildefonso murioacute en 1709 (Serrano y Sanz 270 300) en olor de santidad

Sor Mariacutea Ana Agueda de San Ignacio nacioacute el 3 de marzo de 1695 en la dioacutecesis de la puebla de los Angeles en un rancho del lugar de Santiago Tecaliacute (Serrano y Sanz 270300) Esta monja mexicana escribioacute varias obras durante su vida conventual a lo largo de la cual desempentildeoacute el cargo de priora por muchos antildeos Entre sus obras todas de caraacutecter piacuteo y de laquoamor divinoraquo escribioacute un curioso y laquocopiosoraquo tratado de la Leche virginal de la Soberana Madre de Dios El padre Fr Juan de Villa Saacutenchez hace el siguiente comentario al respecto laquoen que hablando primero en sentido natural de los beneficios que debemos a Nuestra Sentildeora pasa a tratar en sentido miacutestico y alegoacuterico enten-diendo en la leche la doctrinaraquo (Serrano y Sanz 270301) Mexicana fue tambieacuten Sor Petronila de San Joseacute que ejercioacute como abadesa del Real monasterio de Jesuacutes Mariacutea de la ciudad de Meacutexico Escribioacute Vidas de varias religiosas ejemplares obra que tiene su im-portancia ya que al parecer laquoDe esta obra se sirvioacute D Carlos de Siguumlenza y Goacutengora para escribir su Parayso Occidental (Meacutexico 1684) seguacuten eacutel mismo declara en el proacutelogo diciendo lsquoa quien si hay algo bueno en esta historia se le debe todorsquoraquo (Serrano y Sanz 270 354) Menos conocida fue su compatriota Sor Luisa de Santa Catalina natural de Xacona laquopueblo situado en las inmediaciones de Zamora (Meacutexico)raquo siendo bautizada en 1682 Escribioacute Cartas espirituales a su confesor el P Juan Loacutepez de Aguado (Serrano y Sanz 270 361-62)146

Todos estos escritos la mayoriacutea de ellos ignorados por el gran puacuteblico tienen la im-portancia de darnos una perspectiva diferente En otras palabras ensentildearnos la maacutes refinada sensibilidad de muchas mujeres que permanecieron y en su mayoriacutea siguen permaneciendo a laquooscurasraquo de una eacutepoca tan rica de la literatura espantildeola como fue el Siglo de Oro Este siglo fue tambieacuten en su dimensioacuten literaria y artiacutestica patrimonio de la mujer

146 Para profundizar en muchas de estas escritoras hispano-americanas la consulta de la Biblioteca Hispano-Americana de Beristain de Souza resulta de capital importancia

169ESPANtildeOLAS DE ULTRAMAR EN LA HISTORIA Y EN LA LITERATURA

Sor Nada ardores divinos de una monja adolescente escritos ineacutedi-tos de una recieacuten profesa del siglo XVI147

iexclQueacute encantadores son tus amores hermana miacutea espo-sa iexclQueacute deliciosos son tus amores maacutes que el vino Y el aroma de tus perfumes es mejor que el de los baacutelsamos Miel virgen destilan tus labios esposa miel y leche hay en tu lengua y el perfume de tus vestidos es como aroma de incienso (Cantar de los Cantares 4 10-11)

Sor Nada llamada asiacute por humildad seguacuten dice el Indice de manuscritos de la Biblio-teca Nacional de Madrid es uno de los ejemplos maacutes desconocidos e interesantes que tenemos de la poesiacutea y prosa amoroso-religiosa del siglo XVII Hasta la fecha nunca se habiacutea publicado su obra e incluso hasta el antildeo 1995 para mi sorpresa no habiacutea copias microfilmadas de sus manuscritos en la Biblioteca Nacional Serrano y Sanz en su libro Apuntes para una Biblioteca de Escritoras Espantildeolas hace una escueta y pasajera mencioacuten de esta mujer y de su obra (68-69) siendo eso todo lo que hasta ahora se sabiacutea de ella Sus escritos consisten en los siguientes manuscritos

1 laquoEn queacute consiste un verdadero amor de Diosraquo 9 hojas uacutetiles en 4ordm letra del siglo XVII Biblioteca Nacional de Espantildea Manuscrito 1295926

2 laquoPintura del Propio Amorraquo laquoPintura del propio Amorraquo 10 hojas uacutetiles en 4ordm letra del siglo XVII Biblioteca Nacional de Espantildea Manuscrito 1295927

3 laquoEsplicacioacuten sobre en queacute consiste la paz del Almaraquo laquoQuartillas aacute un Alma que padece soledad interiorraquo 7 hojas uacutetiles en 4ordm letra del siglo XVII Biblioteca Nacio-nal de Espantildea Manuscrito 1295828

En cuanto a su persona soacutelo se nos dice que laquose encubrioacute con este seudoacutenimo laquoSor Nadaraquo Esta monja desconocida de origen hispanoamericano posee toda la frescura e ingenuidad de una joven apasionada metida por vocacioacuten u obligacioacuten a ejercer la profesioacuten maacutes comuacuten para mujeres de cierta clase social de su tiempo En sus liacuteneas podemos encontrar un misticismo simple incluso en algunos momentos infantil pero a su vez lleno de una fuerza y sensualidad interior poco comuacuten en escritos de este geacute-nero que desborda los liacutemites del laquoamor divinoraquo a traveacutes de los diaacutelogos entre el Alma y el Esposo Sor Nada consigue proyectar su amor a Dios maacutes allaacute de una experiencia romaacutentica Su experiencia es sincera y genuinamente miacutestica trascendiendo la imita-cioacuten o la propia creacioacuten poeacutetica ficcionalizada (Hatzfeld 30) Algunos pasajes son de un

147 Veacutease mi artiacuteculo Sor Nada ardores divinos de una monja adolescente escritos ineacuteditos de una monja profesa del siglo XVIIraquo Espeacuteculo Revista de estudios literarios 26 (2004) 1-10 Universidad Complutense de Madrid http wwwucmesinfoespeculonumero26sornadahtml

170 JUAN FRANCISCO MAURA

alto contenido eroacutetico con sustantivos y metaacuteforas que recuerdan la maacutes iacutentima unioacuten amorosa en unos casos y el tierno amor maternal en otros

[T]e miro Jesus mio desnudo a las inclemencias del tiempo y ardien-do en puro fuego de Amor por la salud de las Almas y me ensentildeas a que te ame con todo mi corason y puresa de espiritu No atendiendo ni buscando umanos intereses ni a solisitar consuelos ni regalos espi-rituales que suelen empantildear la puresa del noble corason No mi Jesus amable pues antes me ensentildeaste tu puro Amor que desnudo sean [sic] de encaminar mis passos desde el pesebre asta la cuna en donde te miro tan desnudo como el pesebre y todo Sentildeor por mi Amor (Mss 12959 26 hoja 1 v)

El manuscrito (12959 27) de la mencionada serie de tres contiene algunas correccio-nes quizaacute hechas por el confesor o quizaacute por ella misma cuando se dirige con excesiva familiaridad y arrebatado fervor a su Amado148 He escogido el manuscrito (12959 Caja 28) en primer lugar por ser el ejemplo maacutes representativo de su poesiacutea y prosa En este manuscrito encontramos de forma maacutes directa que alegoacuterica toda la frescura de un diaacutelogo entre Jesuacutes y el alma que raya como diriacutea Cervantes laquoa la llana y sin rodeosraquo (667 lib 2 cap 38) con el doloroso y a veces desesperado deseo de la entrega y la unioacuten final con el Amado La ortografiacutea no ha sido corregida respetaacutendose el texto ori-ginal149 Veamos el siguiente fragmento

Mira que te amo con Amor de padre y con Amor de esposo el mas fino y puro enamorado que no tan solo me presio de darte mi mano sino tambien todo mi cuerpo y sangre para que con mi pan de vida te sustentes y te regales a tus anchuras y que con mi propio espiritu vivas en paz como tu lo deseas y que mis amores sean unico alivio en tus trabajos en esta mortal vida pues si esto es asi y sabes que muero por darte vida dime esposa mia de que te fatigas Dame querida tus bras-sos y dime si me amas como yo te amo (Hoja 4)

148 La antologiacutea de Promis ha procurado insertar entre los textos antoloacutegicos algunos que se refieren a la es-critura de mujeres fundamentalmente de aquellos generados en el interior de los espacios conventuales Estos textos se fundan como laquohistorias de vidasraquo y responden casi siempre a los requerimientos de los confesores de las monjas coloniales En este sentido resulta valiosiacutesima la incorporacioacuten de la llamada Relacioacuten autobiograacute-fica de Sor Ursula Suaacuterez como una muestra significativa de la escritura monjil entendida en esta eacutepoca (como tambieacuten en la tradicioacuten europea medieval) inserta en las denominadas laquolabores de manoraquo de las religiosas ya que el texto escrito por mandato se convertiacutea en una suerte de entramado o tejido linguumliacutestico es decir en un nuevo bordado que la mayor parte de las veces el confesor convertido en censor iba haciendo tachando y enmendando En la antologiacutea Promis agrega un texto de Sor Tadea Garciacutea de la Huerta titulado Relacioacuten de la inundacioacuten que hizo el riacuteo Mapocho de la ciudad de Santiago de Chile en el monasterio de Carmelitas titular de San Rafael el diacutea 16 de junio de 1783 se trata de un poema tipo romance escrito en versos octosilaacutebicos y que da cuenta de lo sucedido ese diacutea en el convento (Resentildea de la literatura del reino de Chile de Joseacute Promis Eddie Morales Pintildea httpwwwupaclpublicaciones2002literatura_promishtm)

149 Son frecuentes las faltas ortograacuteficas Una de ellas es el uso constante del seseo La ausencia de acentua-cioacuten y puntuacioacuten exceptuando alguacuten punto o coma arbitrario no seguido casi nunca de mayuacutescula inicial lo mismo que el uso igualmente aribitrario de la h o de b v r q g j m n x etc No olvidemos de la misma forma la laxitud linguumliacutestica existente en el siglo XVII (no sabemos a queacute parte de eacuteste pertenece el manuscrito) asiacute como la joven edad de la monja

171ESPANtildeOLAS DE ULTRAMAR EN LA HISTORIA Y EN LA LITERATURA

Los versos del presente manuscrito poseen la misma fuerza que tiene su prosa Con una estructura estroacutefica indefinida estaacuten aparentemente corregidos por alguien que tu-vo la oportunidad de conocer personalmente a la autora Muy probablemente se trate del padre al que hace referencia al principio del primer manuscrito laquoMandame el Pd que le declare en que consiste un verdadero amor a Diosraquo a continuacioacuten continuacutea con su caracteriacutestica humildad laquo[O]bedesere y dire lo q Dios me inspire segun mi rudesa y simplisidadraquo (Mss 12959 26) En cuanto a la fuerza pasional de esta joven observamos con cierta tristeza coacutemo aparece sublimada en sus escritos con toda la enegiacutea de una joven mujer llena de intensidad y vida pero encerrada en los liacutemites de un convento Veamos un ejemplo en donde responde el Alma en los siguientes versos

O mi enamorado Jesus O mi dulse y tierno amanteO alegria de los sielos O dulse Jesus amable

(Toda Sentildeor me derrito toda Sentildeor me desagoy quiero vivir por ti ea sentildeor abrasadme) [Tachado en el original]

Toda Sentildeor me derrito toda Sentildeor me desagoy quiero morir por vos ea Sentildeor que ya acabo

Ya tus amores me llaman ya tus perfumes me traencon suspiros y agonias Sentildeor hasta que te alcanse

O mi Jesus amoroso no puedo mas dilatarmeya la pasiensia me falta dulse Jesus abrasadme

(No puedo vivir sin vos no puedo mas dilatarmeya la pasiensia me falta dulse) [Tachado en el original]

No puedo vivir sin vos mi dulse Jesus amablepues me teneis echisada siendo mi esposo y mi Padre

Ay que me abraso Ay que me quemo del Amor deJesus nasareno como no tocan y tantildeen a fuego150

Estos versos llenos de arrebato sublimado conectan con toda la tradicioacuten miacutestica es-pantildeola que se remonta a Ramoacuten Llul y que culmina en el maacutes universal de nuestros

150 En toda la fuerza y simbologiacutea del amor maacutes iacutentimo del maacutes alto y sublime placer de la unioacuten de los amantes tal como lo encontramos en el Cantar de los Cantares y en San Juan de la Cruz Leemos en la Biblia

Ya me he quitado la tuacutenica iquestCoacutemo volver a vestirme Ya me he lavado los pies iquestCoacutemo volver a ensuciarlosMi amado metioacute su mano por el agujero (de la llave) y mis entrantildeas se estremecieron por eacutel Me levanteacute para abrir a mi amado Mis manos destilaron mirra y mis dedos mirra exquisita en el pestillo de la cerradura (5 3-5)

Nos ocurre lo mismo con San Juan de la Cruz en su insuperable poema laquoLlama de amor vivaraquo

iexclOh cauterio suaveiexclOh regalada llagaiexclOh mano blanda iexclOh toque delicadoque a vida eterna sabey toda deuda pagaMatando muerte en vida la has trocado

172 JUAN FRANCISCO MAURA

miacutesticos San Juan de la Cruz Esta tradicioacuten se extiende hasta finales del siglo XVII esto es hasta los finales del Barroco siendo un poco maacutes tardiacuteo en la Ameacuterica espantildeola Sin tener como propoacutesito discutir en el presente trabajo a queacute corriente miacutestica pertenece la obra de Sor Nada es necesario resaltar no obstante el hecho de que estaacute escrito por una mujer y ademaacutes de tierna edad El manuscrito 12959 Caja 26 termina con estas pa-labras laquo[T]odas estas boverias escrivi por entretenimiento siendo resien profesa en la religion Sor Nadaraquo Mas no por la juventud de su autora los escritos dejan de tener lo-gradas metaacuteforas imaacutegenes y siacutembolos sacados de la naturaleza La alegoriacutea de la unioacuten matrimonial poseeacute el fuego liacuterico de la maacutes apasionada de las relaciones amorosas vivi-ficada por perfumes flores insectos animales escarchas nieves o abrojos Por lo tanto aunque la narracioacuten destile cierta ingenuidad no carece por ello de un vocabulario rico con el sabor popular de la poesiacutea de los cancioneros y romances de tradicioacuten renacen-tista No ha sido otra mi intencioacuten que la de rescatar del olvido unos escritos en prosa y en verso llenos de frescura y espontaneidad que nos muestran la pasioacuten con que la joven novicia se laquoentrega en cuerpo y almaraquo a los menesteres de su profesioacuten guiada por un padre espiritual en esos primeros antildeos de formacioacuten Esta ha sido la razoacuten por la que presento a continuacioacuten el citado manuscrito en su totalidad

Sor Nada (Mss 1295928)

laquoEsplicacion sobre en que consiste la paz del AlmaraquolaquoQuartillas a un Alma que padece soledad interiorraquo

[7 hojas utiles en 4ordm letra del siglo XVII]

+

Esplicacion sobre en que consiste la paz del Alma

Pareseme segun mi rudo entender que la verdadera paz del Alma con-siste en una muy pura y buena consiencia en un corason liso y bien intensionado en una verdadera rectitud de espiritu en el qual el Alma procura bolar a Dios sin jamas detenerse a respetos umanos ni reparar en que me diran ni de que me censuraran sino me apresuro a seguir a unos entenderes y pareseres dorados en los quales pretende el mundo engantildear y ensuciar si se puede la puresa de un corason unicamente de Dios y de su Santa ley y se lo conserva cristalino con la divina asis-tencia de la gracia y comprendido de su Amor y temor siguiendo la luz divina de tan amante Sentildeor Dios y ombre verdadero con que este ilustrado corason ni se altera ni se mueve por los disfrasses dorados que ase el mundo y sus moradores mayormente con falssas amistades aunque con ellos muestre buena intension Con la misma grasia y luz de Dios conose el buen corason estos disfrasses que le ase el mundo y se retira de todo con espiritu y valor esto sin la menor alterasion sino que en suma paz se retira a buscar a Dios dentro de su mismo corason

173ESPANtildeOLAS DE ULTRAMAR EN LA HISTORIA Y EN LA LITERATURA

y se abrasa con su pura verdad en la qual se le descubren mil interio-res secretos tan solidos puros y verdaderos que la misma Alma queda abismada y de puro grandes no los puede bien comprender ni esplicar pero estos mismos secretos divinos le sirven de espuelas para no solo correr sino bolar con pies de plumas en seguimiento de su bien ama-do Jesus y como este soberano Sentildeor es tan amante de sus espossas las Almas luego que la ve bolar con pies de plumas la sale al encuen-tro en despoblado campo que se deve de llamar Campo de Amor de Dios y el mismo Sentildeor se viene a las manos por ser Dios que nos ama con Amor infinito de Padre benigno y amoroso con que asiendose en contra deso este divino enamorado en lo interyor de el Alma que le busca con ansias de servirle y amarle y en aquella soledad traban una conversasion amorosa y sensilla como la pluma simple de quien esto escrive

Divino enquentroDios y el Alma en la soledad

O Soberano Principe de la paz dise el Alma tus perfumes me traen a ti bolando porque alla en el mundo y sus valedores me pretendian engantildear y entretenerme con pegaminossas amistades que facilmen-te me pudieran envenenar y matarme apartandome de ti Mi dulse Jesus amable mi Redentor Soberano que con tantas ansias me sales al enquentro como siervo [ciervo] erido de mis Amores los quales tu Amor me ofrese para que con tu mismo Amor te ame y te sirva en paz sin perturbarme ni contristarme ni cansarme de padeser pasando si se ofrese por escarchas nieves espinas ni abrojos ni por otros diverssos trabajos ni piedras de contradision que tu me puedes permitir pues por mas que el mar se levante con sus ferosses olas contra mi ni piedras se me tiren al rostro en todo Sentildeor me quieres con serenidad pasifica sin la menor perturbasion Todo Sentildeor quieres que lo tome con Serenidad de espiritu y asi vengo a ti bolando para que mejor me ensentildees a vivir segun las leyes de tu noble condision que me son muy agradables por mas que el mundo me las despresie por segir sus vanidades y torsidas intensiones con apariensias de bien y con este engantildeo y bien me quie-ro mas a mi que no a mi proximo veo que segun mi pareser se pierden muchas Almas y tambien de aquellos que se depresian y pasan por muy espirituales Con que me paresen pocos los que llegan a padeser con desnudes151 de espiritu por tu purisimo Amor y me parese essas se quedan muy atrasadas en la virtud por el peligro de bolver muy atras el paso de modo que se pueden despentildear y pereser en su misma desgra-sia ya por soberbia o por otras enfermedades que se les pega al corason y asi lo pasan como siegos ignorantes sin advertir en sus peligros

151 La letra en cursiva es miacutea

174 JUAN FRANCISCO MAURA

este aquerdo Sentildeor y otros que tu verdad me ensentildea me ase venir uyendo de las paredes del mundo y me vengo a ti Dios mio bolando con las dos Alas del Amor y temor que tu mismo Amor me ofrese tan de gracia y tan de grado que no se duentildeo mio con que lo responder a tan soberano beneficio y finesa de tus entrantildeas de Amorvengo Sentildeor y esposo mio unicamente a descansar en ti pues los peli-gros del camino me an puesto en mucho sobresalto temiendo el per-derte y sin ti perderme para siempre por una eternidad sin fin pues deseo amado mio ganarme ganandote a ti y vivir en ti aora en vida y despues eternamente y estos cuidados me traen fatigada molida y cansada y no podre tener alivio y descanso sino viendome entre tus brassos aunque sea estando en cruz pues ese es el fin de mis deseos vivir y morir en ti ablame mi cordero manso y ensentildeame a que ver-daderamente te ame como fiel esposa ea mi caro amigo dame la ma-no pues sabes Amor mio que en mi no ay mano sin tu misma mano y asi mi Dios y Sentildeor mi Principe Soberano con umilde rendimiento y deseos de alcansarte te suplico me des la mano y me consueles en estos mis trabajos Deseo Sentildeor vivir en paz y los malos amores de mi Naturaleza flaca no me dejan detentar y no quieren por mi desgrasia atropellar con las leyes de tu Amor ni quisiera perturbar mi corason quando me veo con un torvellino de olas y contratiempos que a menu-do me suelen sercar pero si tu Sentildeor me das la mano nada temo sino que me aseguro y vivire en paz sin que me fatiguen los contratiempos pues mi mano en la tuya y mi espiritu en el tuyo por mas borrascas que me envistan no seran bastantes para rendir mi voluntad a la suya bien si para pronunsiar un fiat que resuene bien atras en tus oidos y que en medio de mis fatigas me ponga a cantar tus divinas misericor-dias hea Sentildeor ya pretendo serrar mis labios por no desir mas bove-rias y deseo Sentildeor oir tus palabras de vida eterna abla Sentildeor que tu sierva oye con atension y cuydado mira mi Dios que se me ase tarde y espero con prisa deseando saborearme y aprovecharme de los ecos de tu Santa dotrina pues todas tus palabras saben a eterna vida callen pues mis sentidos y potensias y todo se ponga en paz pues mi dulse y soberano Sentildeor no se escusara de ablar me aun que en mudo silensio hea mi gran Prinsipe de la paz ablame que tus puros amores me traen perdida por estos asperos montes y mis cortos pasos no te pueden dar alcanse mirame mi Dios a tus pies postrada como un vil gusano y me-nor ormiga de la tierraabla Jesus y dise a su esposa el Alma querida esposa mia que me pides y por que te muestras tan fatigada y mal sufrida no vives como corde-rita del campo buscando de mis pechos el sustancial pasto mi Amor no te sustenta y mi grasia te promete eterna vida pues dime amada de que te fatigas y te muestras mal sufrida mira que te amo con Amor de padre y con Amor de esposo el mas fino y puro enamorado que no tan solo me presio de darte mi mano sino tambien todo mi cuerpo y

175ESPANtildeOLAS DE ULTRAMAR EN LA HISTORIA Y EN LA LITERATURA

sangre para que con mi pan de vida te sustentes y te regales a tus an-churas y que con mi propio espiritu vivas en paz como tu lo deseas y que mis amores sean unico alivio en tus trabajos en esta mortal vida pues si esto es asi y sabes que muero por darte vida dime esposa mia de que te fatigas Dame querida tus brassos y dime si me amas como yo te amoResponde el Alma152 Tu mi Dios sabes si yo te amo pues de mi solo se que mis deseos y ansias buelan a ti mas no alcanso a saber si te amo como tu de-seas ser amado y como desconfio tanto de mi y de mis prosederes falssos temo Dios mio perderme y perderte y asi Sentildeor pues no desechas mis Amores y te muestras tan fino en amarme te pido me ensentildees a vivir segun las leyes de tu pura verdad y fina condisionhija mia dise Dios la prueva de un verdadero Amor consiste en sufrir callar y padeser por mi unico Amor y en todo seguir mis pasos sin ja-mas retroseder por mas fragoso que se muestre el camino pues nunca seran tantas las espinas las escarchas ni las nieves ni los vientos bo-rrascosos que te se ofrescan pasar por mi Amor como los que mi tierno y desinteresado Amor paso por ti y siempre con mis pies descalssos y asi hija y esposa mia muestrate costante en seguir lo perfecto de mis passos pues mi braso fuerte sera en ti y peleara por ti y te sera el todo en tus nesesidades y mi Amor te convertira en dulse y suave lo amargo y molesto a la condision de la carrne

Responde el Alma

O mi enamorado Jesus O mi dulse y tierno amanteO alegria de los sielos O dulse Jesus amable

(Toda Sentildeor me derrito toda Sentildeor me desagoy quiero vivir por ti ea sentildeor abrasadme) [Tachado en el original]

Toda Sentildeor me derrito toda Sentildeor me desagoy quiero morir por vos ea Sentildeor que ya acabo

Ya tus amores me llaman ya tus perfumes me traencon suspiros y agonias Sentildeor asta que te alcanse

O mi Jesus amoroso no puedo mas dilatarmeya la pasiensia me falta dulse Jesus abrasadme

(No puedo vivir sin vos no puedo mas dilatarmeya la pasiensia me falta dulse) [Tachado en el original]

No puedo vivir sin vos mi dulse Jesus amablepues me teneis echisada siendo mi esposo y mi Padre

152 La aparicioacuten de una mayuacutescula al principio de una oracioacuten es algo totalmente arbitrario en este ma-nuscrito dada la libertad ortograacutefica de la autora Como se puede observar en la mayor parte de las veces no es el caso

176 JUAN FRANCISCO MAURA

Ay que me abraso Ay que me quemo del Amor deJesus nasareno como no tocan y tantildeen a fuego

Responde Jesus Hija mia tus simples vozes oygo y aunque resuenan bien a mis oidos pero te deseo mas mansa y pasifica en tus fervores ya sabes que no siempre as de vivir en mantillas ni a los pechos de tu Madre por que es rason que padescas con espiritu fuerte como mu-jer valerosa por que a una esposa del Rey soberano y prinsipe de la paz no le estan bien chiquerias ni fervores de nintildea malcriada y ya es ora que la destete su Madre la Naturaleza y que empesando su nueva vida camine con el favor de mi grasia sigiendo mis passos de eterna vida esto con sus pies descalssos segun mis leyes de Amor puro y desinteresado lo tienen ordenado153 y vivir en paz como lo deje en-cargado a mis apostoles Santos repitiendoles varias vezes Vivir en pas y caridad esto es un vivir en Dios y Dios en el Alma y asi hija mia el Alma que vive en paz vive en mi Como mis cortesanos en el cielo y pues me pides que te ensentildee a vivir segun las leyes de mi condision Repito el desir que te debes mostrar sufrida en todo tiempo y estado sin permitir en tu corason que ni aun los fervores se adelanten con estremos ni ademanes sino atiende y aprende de mi purisima Madre pues siempre la veras si bien lo consideras que mientras vivio en el mundo en todos sus trabajos se mostro firme fuerte costante como piedra diamante Pues mirandome nintildeo entre sus brasos desnudo en el pesebre desnudo y crusificado en los brassos de una cruz En estos y otros passos no se mudo su rostro sino que en suma serenidad y pasifico corason toda se sacrificaba enteramente en los brassos de mi Amor y rendido su corason y voluntad en la de mi eterno Padre por ejemplo te la doy y deseo que aprendas de sus nobles calidades pues te aseguro carisima que las leyes de mi condision y pura verdad todo lo allaras enserrado en el corason de mi purisima Madre sedle fiel y descansaras en paz

+

Quartillas a un alma que padese soledad interior

1Un Alma afligida y tristese ve en un campo desiertay en el su esposo la tieneAtormentada y sedienta

153 Es a traveacutes de estas liacuteneas lo que hace suponer que la autora de este diaacutelogo amoroso entre el Alma y Je-suacutes es novicia esto es laquoque estaacute empesando su nueva vidaraquo En las mismas liacuteneas una vez maacutes se hace alusioacuten al laquodesteteraquo de su vida civil laquoa una esposa del Rey soberano y principe de la paz no le estan bien chiquerias ni fervores de nintildea malcriada y ya es ora que la destete su Madre la naturalesaraquo (fol 5)

177ESPANtildeOLAS DE ULTRAMAR EN LA HISTORIA Y EN LA LITERATURA

2Pendiente se ve en el AyreSolo un hilo la sustentasin tocar el pie en el sueloporque del no tome tierra

3Mirandola esta yto a ytoaquel sol que la atraviesay la enviste con sus rayosmas ella no pestantildeea

4Como sigarra padese y como a tal se atormentabatiendo sus mismas Alasy el corason se atraviesa

5Con penas sustos temoresquando se mira assi mesmasin tener valor en nadaporque es la misma flaquesa

6Pero el Amor de su esposotoda su atension le llevay la pone en un abismopero cubierto en tiniebla

7Desea dar algun bueloy subir con ligeresapero se mira travadacon una fuerte cadena

8Clama suspira y padeseMas del todo se sujetaRindiendo su voluntadA la divina clemencia

9Los enemigos del AlmaCruelmente le asen guerray ella aunque firme y constantelos reselos la atormentan

178 JUAN FRANCISCO MAURA

10de todos modos padeseaunque gosa la asistensiadel divino esposo amadoque en su interior se recrea

11Solo de verla penary con verla tan serenadise resibe mil gustosde su sigarra pequentildea

12Le sabe el mundo a mil yelesy su trato le atormentaviendo en el mil falsedadesque todas saben a tierra

13Para poderse librardeja de correr y buelacon las Alas del Amory el mismo Amor se la lleva

Una vida dedicada a un amor divino un amor que le haraacute llenar un buen nuacutemero de cuartillas dedicadas a tan alta empresa Se desconoce si la vocacioacuten de Sor Nada con-tinuoacute con tanta intensidad el resto de sus diacuteas Ciertamente la vida en el covento no era faacutecil En algunos casos la experiencia era traumaacutetica incluso fatal para algunas de las adolescentes de la Ameacuterica Espantildeola Las reglas del claustro eran severas por varias razones Estas joacutevenes si no teniacutean el permiso de la superiora no podiacutean recibir visitas no podiacutean volver a sus casas su correspondencia era censuraba y no podiacutean salir del periacutemetro conventual Igualmente se levantaban antes del amanecer para oir misa tra-bajaban el resto del diacutea y lo maacutes interesante es que muchas veces esta vida era aceptada por muchas

Page 29: Tercera parte: Mujeres en la vida intelectual - …parnaseo.uv.es/Editorial/Maura/TerceraParte.pdf · La Biblia, por su parte, hace repetidas menciones de la mujer y sobre el comporta-

159ESPANtildeOLAS DE ULTRAMAR EN LA HISTORIA Y EN LA LITERATURA

llerizo de Carlos V Dontildea Leonor de Vieo Dontildea Mariacutea Manrique hija del Marqueacutes de Aguilar y Dontildea Catalina de la Cerda hija del segundo Duque de Medinaceli (Romero 2)

Existen noticias concretas de la seacuteptima virreina de la Nueva Espantildea (1586) dontildea Blanca de Velasco marquesa de Villamanrique En ellas destaca lo anteriormente men-cionado sobre la falta de tolerancia existente en aquellos tiempos difiacutecilmente com-prensible si no fuera por fragmentos esporaacutedicos conservados sobre la vida colonial en la Nueva Espantildea En la siguiente Relacioacuten hecha por autores anoacutenimos sobre la visita que hizo Fray Alonso Ponce Comisario General de la Orden Seraacutefica a las provincias de la Nueva Espantildea se mencionan las eneacutergicas medidas que con los miembros de su orden en su opinioacuten de moral laquomuy relajadaraquo tomoacute este religioso Tambieacuten aparecen mencionadas sus relaciones con la Virreina

Captoacutese ademaacutes la enemistad del gobernante y de la Virreina Dontildea Blanca de Velasco hija del cuarto Conde de Nieva sentildeora seguacuten pare-ce de conducta ligera y caraacutecter maacutes que dominante laquoPor este mismo tiempo (septiembre de 1586) fueron el Virey y la Vireyna a holgarse y recrearse en la cibdad de Xochimilco Posoacute con toda su casa dentro de nuestro convento en un dormitorio deacutel y detuacutevose alliacute siete u ocho diacuteas en que los indios les hicieron grandes fiestas aunque les costaron caras porque en una dellas murieron dos o tres dellos con un tiro que se disparoacute y reventoacute y al principal indio de aquella cibdad hirieron muy malraquo (Romero 3-4)

A pesar del riacutegido control eclesiaacutestico y civil que habiacutea en la Nueva Espantildea existieron tambieacuten pareacutentesis en los que incluso miembros de la iglesia y mujeres mdashhumanos al fin y al cabomdash pudieron disfrutar de algunos momentos de regocijo y alegriacutea Con-tinuando con la cita anterior el mismo autor se queja del laquoexcesoraquo de libertad en los frailes que se suponiacutea que teniacutean que profesar una extremada pobreza y no digamos castidad En primer lugar se describen pormenorizadamente la abundancia en el tipo y cantidad de comida de toda clase dulces y vino que se consumieron con largueza y generosidad durante aquellas fiestas Pero lo que maacutes indigna al autor (o autores) fue que llegasen a entrar mujeres en el convento

y aunque todo esto es malo delante de Dios y delante de los hom-bres lo que maacutes mal parecioacute y de que todo el mundo tuvo que mur-murar fueacute la demasiada libertad rotura y disolucioacuten que hubo en en-trar y estar muy de propoacutesito mujeres no soacutelo la Vireyna y las suyas sino otras muchas dentro del dicho convento y andar por las celdas como si fuese cosa profana y como si no hubiera breve apostoacutelico que soacute graves penas y censuras prohibe estas entradas y como si a los frai-les no los comprendiera el dicho breve por admitirlas y no estuviera asiacute declarado y mandado por nuestros estatutos generales de Toledo (Romero 4-5)

La preocupacioacuten por las laquotentaciones de la carneraquo fuera del matrimonio siempre es-tuvo en la mente de los religiosos espantildeoles asiacute como de otras nacionalidades y reli-

160 JUAN FRANCISCO MAURA

giones que intentaban vanamente erradicar algo tan intriacutenseco al ser humano como a cualquier otra especie animal Esta preocupacioacuten se acentuoacute mucho maacutes en el Nuevo Mundo donde muchas sociedades tribales no veiacutean a la mujer como parte integrante de su propiedad privada La razoacuten es obviamente socioloacutegica y ha existido desde el principio de los tiempos en las civilizaciones maacutes primitivas laquoNo desearaacutes a la mujer del proacutejimoraquo El quebrantar este precepto equivaldriacutea a desestabilizar desde su base a la sociedad judeo-cristiana fundamentada en la familia Las penas aplicadas en estas transgresiones seraacuten lo suficientemente severas como para marginar socialmente mdashen el mejor de los casosmdash a aquellos que las pongan en praacutectica Siendo la mujer la encar-gada por la naturaleza de trasmitir la descendencia de la especie su libertad sexual se veraacute limitada por el peligro de quedar embarazada cada vez que ignore tal elemental precepto140

Primeras escritoras del Nuevo Mundo

Contra cuerdos y contra locos estaacute obligado cualquier caballero andante a volver por la honra de las mujeres cualesquiera que sean Cuanto maacutes por las reinas de tan alta guisa y pro como fue la reina Madaacutesima a quien yo tengo particular aficioacuten por sus buenas partes porque fuera de haber sido fermosa ademaacutes fue muy prudente y muy sufrida en sus calamidades que las tuvo muchas (Cervantes Don Quijote)

Fueron varias las escritoras que durante los siglos XVI y XVII tuvieron una relacioacuten di-recta o indirecta con el Nuevo Mundo Muchas de ellas eligieron la vida monaacutestica mdashen algunos casos como refugio huyendo de sus maridosmdash uacutenica salida en una estructura social en donde no eran muchas las opciones especialmente en una eacutepoca donde el fac-tor religioso pesaba casi tanto como el econoacutemico pero sobre todo para dedicarse a una vida espiritual difiacutecilmente alcanzable en otras circunstancias Mariloacute Vigil apunta que las monjas que lo eran por su propia voluntad ademaacutes de tener inquietudes religiosas tambieacuten las teniacutean intelectuales como es el caso de la escritora miacutestica espantildeola Santa Teresa de Jesuacutes (1515-1582) que ademaacutes de tener una de las vidas maacutes interesantes que se conozcan supo sacar tiempo para escribir las maacutes bellas manifestaciones de la poesiacutea liacuterica y sobre todo de la prosa castellana (Vigil 237-38) Cada una de estas mujeres de-dicadas a la vida literaria y espiritual de su tiempo se merece muchiacutesimo maacutes espacio del que se les pueda ofrecer en estas pocas liacuteneas No obstante con estas pasajeras men-

140 Aunque afortunadamente las cosas han cambiado para la mujer no se debe dejar de mencionar la can-tidad de abusos sexuales de la que es viacutectima en la sociedad moderna

161ESPANtildeOLAS DE ULTRAMAR EN LA HISTORIA Y EN LA LITERATURA

ciones se espera al menos incluirlas y poder despertar el suficiente intereacutes para que sus vidas y sus obras no sigan sumergidas en las simas del olvido Para que estas mujeres de la iglesia pudiesen satisfacer su curiosidad cognoscitiva era necesario romper todas aquellas barreras que supusiesen un estorbo o una restriccioacuten a la hora de investigar consultar o hablar con cualquier persona religiosa de cualquier orden o secular ya fue-se obispo o cleacuterigo Las posiciones intelectuales entre las diferentes oacuterdenes religiosas fueron muy dispares como bien es sabido No eran iguales los planteamientos teoloacute-gicos de los dominicos que los de los franciscanos o los de los carmelitas que los de los agustinos o jesuitas Era necesario por lo tanto tener acceso a estas fuentes de informa-cioacuten para poder constrastar las diferencias y hacer valoraciones propias (Vigil 237-38) El escritor espantildeol Caro Baroja destaca el caraacutecter enciclopeacutedico del catolicismo donde se han integrado corrientes y posturas muy dispares que a traveacutes del diaacutelogo daban cierto espacio al creyente con maacutes curiosidad intelectual para que este pudiese compa-rar y valorar las diferentes opciones que se le ofreciacutean (Vigil 237-38)

Varias de estas mujeres intelectuales fueron hijas de conquistadores que aunque na-cidas en suelo americano seguiacutean expresaacutendose en la lengua de sus padres con no me-nos fuerza que sus contemporaacuteneas peninsulares Es cierto que existieron numerosas escritoras en el Nuevo Mundo durante el siglo XVIII algunas dedicadas incluso al estudio de las matemaacuteticas como la mexicana Dontildea Francisca Gonzaga y Castillo Pero para limitar el presente trabajo a los siglos XVI y XVII uacutenicamente se incluiraacuten ejemplos de estos dos siglos

La peruana Josefa de Alarcoacuten publicoacute en 1648 unas liras dedicadas a las Exequias del Priacutencipe Baltasar Carlos

Cifro en capilla breveEl tribunal de la Magestad maacutes graveEn fe de lo que debeA Carlos que en dos mundos no cabe141

El caso de Sor Jeroacutenima de la Asuncioacuten es muy interesante una mujer que tuvo la oportunidad de viajar a Meacutexico y posteriormente a las Filipinas para cumplir con las mi-siones que le habiacutean sido encomendadas por su orden Nacida en Toledo en 1555 en el seno de una noble y acaudalada familia estuvo destinada a recorrer el mundo ofrecien-do sus servicios a todos los necesitados distinguieacutendose por su ardiente caridad laquovien-do que los galeotes eran tratados con dureza excesiva sobre todo cuando los llevaban de un pueblo a otro procuroacute aliviar las penas de aquellos desgraciados y lo consiguioacute en parteraquo (Serrano y Sanz 268 65) Hija del licenciado e ilustre jurista Pedro Garciacutea Yaacute-ntildeez y de dontildea Catalina de la Fuente ingresoacute contra su voluntad en el monasterio de las Clarisas de Santa Isabel de los Reyes (Toledo) el 5 de agosto de 1570 (Trevintildeo 46) hay que decir que eacutesta no seraacute la uacutenica voluntad contra la que tuvo que luchar

Sor Jeroacutenima se embarcoacute para Meacutexico y de alliacute partioacute hacia Manila junto con siete compantildeeras en el famoso laquoGaleoacuten de Manilaraquo que saliacutea anualmente del puerto mexi-cano de Acapulco Su viaje a las Filipinas duroacute un antildeo y tres meses desde su salida de Espantildea tiempo en el que demostroacute un gran valor y determinacioacuten por el soacutelo hecho de

141 Manuel Serrano y Sanz Apuntes para una biblioteca de escritoras espantildeolas desde el antildeo 1401 al 1833 vols 268 269 270 271 Biblioteca de Autores Espantildeoles (Madrid Atlas 1975) 268 19

162 JUAN FRANCISCO MAURA

embarcarse en tan precarias naves Fue la primera misionera de Oceaniacutea muriendo en Manila en 1621 Alliacute fundoacute el monasterio de Santa Clara que perviviriacutea hasta ser bom-bardeado en la Segunda Guerra Mundial (Trevintildeo 47) Escribioacute su Vida donde trata de la fundacioacuten del convento y de todas las tribulaciones mdashllegoacute a ser excomulgadamdash y satisfacciones que una vida dedicada a una causa justa proporciona Tambieacuten escribioacute una obra de caraacutecter filosoacutefico-teoloacutegico titulada Carta de marear en el mar del mundo nombre alegoacuterico que da cuenta de la enorme distancia recorrida a traveacutes del laquomar del espiacuterituraquo por sor Jeroacutenima He aquiacute algunos de sus versos de caraacutecter religioso

Vuestra soy para vos naciacuteiquestQueacute mandaacuteis hacer de miacute Inaccesible grandezaEterna Sabiduriacuteay bondad del alma miacuteaDios un ser poder y Altezamirad la suma pobrezade eacutesta que se ofrece aquiacuteiquestQueacute mandaacuteis hacer de miacute (Serrano y Sanz 268 66)

Ya en Meacutexico tenemos otro ejemplo de una mujer dedicada por completo a Dios y al estudio y composicioacuten de obras de caraacutecter teoloacutegico Dontildea Ana Mariacutea del Costa-do de Cristo nacida en la ciudad de Tlaxcala hacia el antildeo 1650 Tomoacute la orden de San Francisco para consagrarse a las labores de su orden y a la escritura Se dice que con los escritos de Dontildea Ana Mariacutea se podriacutean formar veinte tomos (Serrano y Sanz 268 282) Estas son algunas de sus obras Vida y muerte de Jesucristo Nuestro Sentildeor Vida del Seraacutefico Padre San Francisco de Asiacutes Vida de la iacutenclita Virgen Santa Clara Vida del sutiliacutesimo doctor Juan Duns Escoto

Pero no todas las monjas tuvieron vidas tan dedicadas al estudio y la oracioacuten Loacutegica-mente entre un nuacutemero tan grande de mujeres existioacute de todo y seriacutea un error pensar que todos los conventos femeninos estaban integrados por laquocaacutendidas palomasraquo Una monja en el siglo XVI y XVII teniacutea mucha maacutes fuerza que una mujer ordinaria ya que actuaban en grupo y la entrada a los recintos donde viviacutean estaba permitida solo a mu-jeres Esta situacioacuten las haciacutea mucho maacutes fuertes a todos los niveles que una mujer sola protegida uacutenicamente por su familia laquoLas monjas durante los siglos XVI y XVII lucharon por eludir la clausura y por zafarse del control que los frailes de las secciones masculi-nas de sus congregaciones ejerciacutean sobre ellasraquo (Vigil 230) Soacutelo un antildeo maacutes tarde que dontildea Ana Mariacutea del Costado de Cristo en 1651 y a 12 leguas de Meacutexico nacioacute la sin par Sor Juana Ineacutes de la Cruz hija de don Pedro Manuel de Asbaje natural de Vergara (Vizcaya) y de Dontildea Isabel Ramiacuterez de Santillana hija de espantildeoles (Serrano y Sanz 268 289) Por ser sin lugar a dudas la poeta maacutes importante de su tiempo y probable-mente la maacutes conocida del mundo hispano no profundizaremos en ella Su obra es un canto a la inteligencia y el exponente maacutes destacado de la literatura barroca americana tanto en prosa como en verso Destacareacute simplemente que Sor Juana Ineacutes pese a vivir en un sociedad donde no eran excesivas las libertades concedidas a las mujeres tuvo el caraacutecter y la determinacioacuten de dejarnos las maacutes bellas poesiacuteas amorosas que si bien estuvieron enmarcadas en un ambiente religioso como era de esperar por su condicioacuten

163ESPANtildeOLAS DE ULTRAMAR EN LA HISTORIA Y EN LA LITERATURA

pudieron transcender como unas de las maacutes bellas manifestaciones literarias que hoy en diacutea se conservan Fue su agudeza mental sensibilidad y cultura tal que no fueron suficientes los soacutelidos muros del convento para contener el genio de tan extraordinaria mujer Recordemos sus conocidiacutesimos versos en defensa de las mujeres

Hombres necios que acusaacuteisa la mujer sin razoacutensin ver que sois la ocasioacutende lo mismo que culpaacuteis142

Las metaacuteforas y la delicadeza que emplea en rebatir a su obispo en su laquoRespuesta a sor Filotea de la Cruzraquo no son solamente el epiacutetome del feminismo de su tiempo sino una de las maacutes brillantes manifestaciones del barroco hispano Poesiacutea teatro ensayo y un conocimiento extraordinario de las ciencias claacutesicas de su tiempo hacen de esta mujer un ejemplo extraordinario de las letras universales Ya son cientos los artiacuteculos y libros que se han escrito sobre Sor Juana y no dejan de aparecer tesis doctorales sobre los maacutes diversos temas conectados con la citada autora143 Como nos dice Stephanie Merrim en su documentada obra Early Modern Womenrsquos Writing and Sor Juana Ineacutes de la Cruz

She wrote and published on secular themes as atypical for a nun as human love Her remarkably extensive writings essayed and reenacted most of the (male) poetic dramatic theological and even philosophi-cal discourses of her times in the metropolis making her works a com-pendium of baroque culture in its diversity and syncretism Sor Juana self-creation as a learned women effectively toppled many of the walls in which she was materially enclosed and positioned her within the dynamic world of early modern European culture (xii)

No se debe dejar de mencionar a otras escritoras novohispanas de la eacutepoca que aun-que no fueron tan proliacuteficas y relevantes como Juana Ineacutes de la Cruz dejaron testimo-nio de algunos acontecimientos que tienen intereacutes socioloacutegico o testimonial Este es el caso de Dontildea Mariacutea Estrada Medinilla de igual nombre y apellido que la mujer que acompantildeoacute a las tropas de Corteacutes en su primera entrada a Meacutexico Natural de Meacutexico publicoacute toda su obra a mediados del siglo XVII concentraacutendose principalmente en la lle-gada del Marqueacutes de Villena virrey y capitaacuten general de la Nueva Espantildea a la ciudad de Meacutexico en el antildeo 1640 Escrita en octavas reales la obra trata de las fiestas de toros y cantildeas con que se obsequioacute al citado virrey Fue impresa en Meacutexico en 1641 (Serrano y Sanz 269 402)

Mucho maacutes importante para el presente libro es Dontildea Isabel de Guevara que escribioacute en 1556 la carta en que se expone la ayuda que ofrecieron las mujeres en el descubri-miento y conquista del Riacuteo de la Plata No cabe la menor duda de que esta carta es uno

142 Para una mejor comprensioacuten del caraacutecter de esta excepcional mujer veacutease entre los numeros trabajos publicados Fredo Arias de la Canal Intento de psicoanaacutelisis de Juana Ineacutes y otros ensayos sorjuanistas (Meacutexico Frente de Afirmacioacuten Hispanista 1972) 47

143 Veacuteanse entre otros trabajos Octavio Paz Sor Juana Ineacutes de la Cruz o las trampas de la fe Georgina Sabat de Rivers En busca de Sor Juana Margo Glantz Sor Juana la comparacioacuten y la hipeacuterbole Gerard C Flynn Sor Juana Ineacutes de la Cruz Stephanie Merrim Feminist perspectives on Sor Juana Ineacutes de la Cruz Pamela Kirk Sor Juana Ineacutes de la Cruz religion art and feminism

164 JUAN FRANCISCO MAURA

de los documentos maacutes importantes con que contamos en relacioacuten a la aportacioacuten fe-menina en el proceso de la conquista de Ameacuterica Su importancia viene dada por varios factores Primero es uno de los primeros testimonios mdashsi no el primeromdash en donde se expone abiertamente la indispensable colaboracioacuten de las mujeres en el descubrimien-to y conquista de tierras en el Nuevo Mundo laquoQue si no fuera por ellas todos fueran acabadosraquo En segundo lugar la informacioacuten vertida en estas liacuteneas presenta en parte la manera de pensar de una mujer espantildeola en tales circunstancias Extraordinario tes-timonio de primera mano que nos da una idea de lo que significoacute en muchos casos el valor y entrega constantes de muchas de estas mujeres que auacuten a riesgo de perder sus vidas no dudaron en luchar al lado de los hombres por una causa que consideraban laquocomuacutenraquo

La relevancia histoacuterica de dicha carta hace que merezca ser transcrita en su totali-dad

Carta de dontildea Isabel de Guevara a la princesa gobernadora dontildea Juana exponiendo los trabajos hechos en el descubrimiento y conquista del Riacuteo de la Plata por las mujeres para ayudar a los hombres y pidiendo repartimiento

para su marido Asuncioacuten 2 de julio de 1556

Muy alta y muy poderosa sentildeora

A esta provincia del Riacuteo de la Plata con el primer gobernador de ella don Pedro de Mendoza hemos venido ciertas mujeres entre las cuales ha querido mi ventura que fuese yo la una y como la armada llegase al puerto de Buenos Aires con mil quinientos hombres y les faltase el bastimento fue tamantildea el hambre que a cabo de tres meses murie-ran los mil esta hambre fue tamantildea que ni la de Jerusalem se le puede igualar ni con otra ninguna se puede comparar Vinieron los hombres en tanta flaqueza que todos los trabajos cargaban de las pobres mu-jeres asiacute en lavarles las ropas como en curarles hacerles de comer lo poco que teniacutean limpiarlos hacer centinela rondar los fuegos armar las ballestas cuando algunas veces los indios les veniacutean a dar guerra hasta cometer a poner fuego en los versos y a levantar los soldados los que estaban para ello dar arma por el campo a voces sargentean-do y poniendo en orden los soldados porque en este tiempo como las mujeres nos sustentamos con poca comida no habiacuteamos caiacutedo en tanta flaqueza como los hombres Bien creeraacute V A que fue tanta la so-licitud que tuvieron que si no fuera por ellas todos fueran acabados y si no fuera por la honra de los hombres muchas maacutes cosas escribiera con verdad y los diera a ellos por testigos Esta relacioacuten bien creo que la escribiraacuten a V A maacutes largamente y por eso cesareacute Pasada esta tan peligrosa turbunada determinaron subir el riacuteo arriba asiacute flacos como estaban y en entrada de invierno en dos bergantines los pocos que quedaron vivos y las fatigadas mujeres los curaban y los miraban y les guisaban la comida trayendo la lentildea a cuestas fuera del naviacuteo y animaacutendolos con palabras varoniles que no se dejasen morir que presto dariacutean en tierra de comida metieacutendolos a cuestas en los

165ESPANtildeOLAS DE ULTRAMAR EN LA HISTORIA Y EN LA LITERATURA

bergantines con tanto amor como si fueran sus propios hijos Y como llegamos a una generacioacuten de indios que se llaman tinbues sentildeores de mucho pescado de nuevo los serviacuteamos en buscarles diversos modos de guisados porque no les diese en rostro el pescado a causa de que lo comiacutean sin pan y estaban muy flacos Despueacutes determinaron subir el Paranaacute arriba en demanda de bastimento en el cual viaje pasaron tanto trabajo las desdichadas mujeres milagrosamente quiso Dios que viviesen por ver que en ellas estaba la vida de ellos porque todos los servicios del naviacuteo los tomaban ellas tan a pechos que se teniacutea por afrentada la que menos haciacutea que otra sirviendo de marear la vela y gobernar el naviacuteo y sondar de proa y tomar el remo al soldado que no podiacutea bogar y escotar144 el naviacuteo y poniendo por delante a los soldados que no se desanimasen que para los hombres eran los trabajos verdad es que a estas cosas ellas no eran apremiadas ni las haciacutean de obliga-cioacuten ni las obligaba si solamente la caridad Asiacute llegaron a esta ciudad de la Asuncioacuten que aunque ahora estaacute muy feacutertil de bastimentos en-tonces estaba de ellos muy necesitada que fue necesario que las muje-res volviesen de nuevo a sus trabajos haciendo rosas con sus propias manos rosando y carpiendo y sembrando y recogiendo el bastimento sin ayuda de nadie hasta tanto que los soldados guarecieron de sus fla-quezas y comenzaron a sentildeorear la tierra y adquirir indios e indias de su servicio hasta ponerse en el estado en que ahora estaacute la tierra He querido escribir y traer a la memoria de V A para hacerle saber la ingratitud que conmigo se ha usado en esta tierra porque al presente se repartioacute por la mayor parte de los que hay en ella asiacute de los anti-guos como de los modernos sin que de miacute y de mis trabajos se tuviese ninguna memoria y me dejaron de fuera sin me dar indio ni ninguacuten geacutenero de servicio Mucho me quisiera hallar libre para me ir a presen-tar delante de VA con los servicios que a SM he hecho y los agravios que ahora se me hacen mas no estaacute en mi mano porque estoy casada con un caballero de Sevilla que se llama Pedro de Esquivel que por servir a SM ha sido causa que mis trabajos quedasen tan olvidados y se me renovasen de nuevo porque tres veces le saqueacute el cuchillo de la garganta como allaacute VA sabraacute A que suplico mande me sea dado mi repartimiento perpetuo y en gratificacioacuten de mis servicios [en el origi-nal del AHN Diversos doc 141 dice ademaacutes mande que sea proveydo mi marido de alguacuten cargo conforme a la calidad de su persona pues el de su parte por sus servicios lo merece] lo merece Nuestro sentildeor acre-ciente su Real vida y estado por muy largos antildeos De esta ciudad de la Asuncioacuten y de julio 2 1556 antildeosServidora de V A que sus Reales manos besa

Dontildea Isabel Guevara

144 Sacar agua de un riacuteo acequia o presa

166 JUAN FRANCISCO MAURA

Sobremdash A la muy alta y muy poderosa sentildeora Princesa dontildea Joana Gobernadora de los reinos de Espantildea etc ndash En su Consejo de Indias (Isabel de Guevara 619-21)

Iroacutenicamente la carta teniacutea que llegar a manos de la desdichada heredera del trono de Castilla e hija de los Reyes Catoacutelicos Juana laquola Locaraquo que habiacutea muerto el antildeo an-terior Son profeacuteticas las palabras de esta mujer no soacutelo porque sus hechos personales quedasen en el olvido sino porque incluso se ha borrado la historia de las mujeres en el Nuevo Mundo negando su presencia Por lo menos Isabel Guevara tuvo acceso a una pluma iquestCuaacutentas seriacutean las que ni siquiera sabriacutean escribir

Otra contemporaacutenea fue dontildea Leonor de Iciz que vivioacute durante la segunda mitad del siglo XVI Interesa sobre todo por los sonetos que escribioacute en elogio de Ercilla soldado que participoacute en la conquista de Chile y que se inmortalizoacute con su obra La Araucana (Serrano y Sanz 269 534) Lo mismo hizo Dontildea Bernarda Lintildeaacuten en 1610 autora de otro soneto en memoria del capitaacuten Gaspar Peacuterez de Villagraacute que participoacute en la conquista de Nuevo Meacutexico (Serrano y Sanz 270 14) Los escritos de estas mujeres tratan de de dos de las eacutepicas maacutes dramaacuteticas de la conquista

En el Peruacute y en pleno siglo XVII aparece otra fundadora de conventos Sor Bernardina de Jesuacutes que ademaacutes fue comparada con Santa Teresa por la semejanza de sus laquocartasraquo con las de la santa de Avila Fue fundadora del convento de Tacunga en Quito maacutes tarde destruiacutedo por un terremoto Dice Serrano y Sanz con respecto a su biografiacutea un tanto legendaria que fue carmelita descalza de Lima y hermana de Dontildea Mariacutea Benavides y Esquivel abuela de D Pedro de Peralta Barnuevo (Serrano y Sanz 269 553) Dicen que esta santa se alimentoacute durante treinta antildeos con laquochochos y caacutescaras de naranja hecho tan raro como increiacuteble Cuando fallecioacute reparaban las monjas en ponerle una vara de azucenas porque habiacutea sido casada y aquellas flores aparecieron milagrosamente sobre el cadaacuteverraquo (Serrano y Sanz 269 553)

Otra limentildea del primer cuarto del siglo XVII con reputacioacuten de santa fue Dontildea Luisa Melgarejo En este caso no se trata de una religiosa de oficio sino de la mujer del doctor Juan de Soto La uacutenica diferencia es que dontildea Luisa al parecer teniacutea laquovisiones y reve-lacionesraquo lo que debioacute poner nervioso a maacutes de un miembro del tribunal del laquoSanto Oficioraquo que consideraron sus escritos laquoculpadosraquo De su papel de laquosantaraquo pasa por lo tanto al de laquoposesaraquo o laquoendemoniadaraquo El inquisidor de Lima Gaitaacuten escribioacute un infor-me donde a traveacutes de la opinioacuten puacuteblica y de otras averiguaciones se deciacutea que dontildea Luisa Melgarejo laquomujer santaraquo sabiacutea cuando las almas de los difuntos saliacutean del Purga-torio El diacutea 14 de noviembre de 1623 se decidioacute tomar posesioacuten de todos los cuadernos en los que habiacutea escrito las experiencias de todos sus laquoarrobos suspensiones extasis y revelacionesraquo Estos cuadernos una vez recogidos presentaron toda una serie de al-teraciones borrones adiciones enmiendas incluso diferente letra por lo que despueacutes de haber sido examinados resultaron culpables145 Excelente imaginacioacuten debioacute tener dontildea Luisa Melgarejo la suficiente al parecer para convencer a algunos miembros de la iglesia de que en sus escritos laquohabiacutea algoraquo que mereciacutea la pena Estas cosas ocurriacutean en Lima uno de los centros culturales maacutes importantes de la vida social y poliacutetica en la Ameacuterica espantildeola Lima a comienzos del siglo XVII seguacuten el empadronamiento llevado

145 Serrano y Sanz 270 47 Veacutease J T Medina Historia del tribunal del Santo Oficio de la Inquisicioacuten de Lima (1569-1820) (Santiago Imprenta Gutemberg 1887) Tomo II 34-41

167ESPANtildeOLAS DE ULTRAMAR EN LA HISTORIA Y EN LA LITERATURA

a cabo en 1614 por el marqueacutes de Montesclaros era una ciudad de 25000 habitantes de los que 11000 eran espantildeoles El nuacutemero de religiosos y religiosas llegaba a 1720 (Pittaluga 77)

Se sabe que en la Isla de Santo Domingo durante el siglo XVI nacioacute o al menos resi-dioacute una poeta de ceacutelebre apellido en los aconteceres del Nuevo Mundo Dontildea Elvira de Mendoza de la que se conserva un manuscrito en la Real Academia de la Historia laquoCantares miacuteos que estaacuteis rebeladosraquo Eugenio de Salazar hace un elogio de ella como poeta en un Soneto a la ilustre Poeta y Sentildeora Dontildea Elvira de Mendoza moradora en la ciudad de Santo Domingo (Serrano y Sanz 270 53)

Nacida en Burgos sobre el antildeo 1590 dontildea Luisa de Padilla merece un lugar aparte dentro del grupo de mujeres escritoras de su eacutepoca Por su estilo faacutecil y castizo su no-vedad de pensamientos y su rica erudicioacuten recibioacute el siguiente comentario de Manuel Serrano y Sanz laquoPocas figuras hay en nuestra historia literaria femenil que puedan compararse a esta eminente prosista acaso la maacutes notable de cuantas florecieron en Es-pantildea durante el siglo XVIIraquo (Serrano y Sanz 270 95-96) Este comentario y comparacioacuten deberiacutea ampliarse para que tambieacuten incluyese a laquola historia literaria varonilraquo

Dontildea Luisa fue defensora de la labor que la Inquisicioacuten estaba realizando en la laquolim-piezaraquo de mujeres laquosoldados del demonioraquo que existieron en algunas provincias espa-ntildeolas en aquel tiempo Muchas de las mujeres que combinaban la magia con los po-deres curativos fueron condenadas no solamente por hombres de la Inquisicioacuten sino tambieacuten por mujeres de todas las clases sociales como es el caso de Luisa de Padilla condesa de Aranda En su obra Elogios de la verdad e invectiva contra la mentira preveniacutea contra aquellos que practicaban artes en contra de la religioacuten cristiana La magiacutea negra seguacuten Padilla era la causante de que muriesen casi tantas personas como otras causas naturales habieacutendose descubierto hasta seis mil brujas en Vizcaya y Guipuzcua con-fesando una mujer de un pueblo pequentildeo haber matado con su laquomagiaraquo a ochocientas personas (Perry 31) Eran estos laquomales de ojoraquo y maldiciones seguacuten la autora las causas de que se secasen los pechos de las madres lactantes que se separasen las parejas casa-das y que abortasen las embarazadas (Perry 31)

Si se tiene en cuenta que dontildea Luisa estuvo emparentada con la maacutes rancia aristocra-cia de su tiempo o lo que es lo mismo con algunos de aquellos que en cierta manera dirigiacutean los destinos de Espantildea en aquella eacutepoca (Duques de Lerma Duque de Uceda Marqueacutes de Cueacutellar Conde de Santa Gadea Marqueacutes de Belmonte por citar algunos) se comprenderaacute mejor su identificacioacuten con una institucioacuten que en teoriacutea velaba por la salvaguarda de los valores laquoeternosraquo de una Espantildea destinada a ser la campeona del ca-tolicismo durante los siglos XVI y XVII El padre de dontildea Luisa fue don Martiacuten de Padilla y Manrique extraordinario militar que proboacute su valor contra enemigos moriscos ingle-ses holandeses piratas berberiscos y el renegado genoveacutes Muley Faxad Fue veterano de la batalla de Lepanto donde apresoacute a cuatro galeras y acompantildeoacute con su escuadra a la reina Dontildea Margarita de Austria cuando vino de Geacutenova en 1598 laquoHabiacutea obtenido a 24 de julio de 1587 el tiacutetulo de Conde de Santa Gadea y en 1596 el de Capitaacuten General de la Armada del mar Oceacuteanoraquo (Serrano y Sanz 27095-96)

Por otra parte tambieacuten se sabe que dontildea Luisa participoacute directamente y desde tem-prana edad en la praacutectica de algunas actividades intelectuales como la historia y la arqueologiacutea a la vez que dedicaba su tiempo a virtudes cristianas como la caridad y el socorro de los necesitados (Serrano y Sanz 270 97) Resulta mucho maacutes faacutecil compren-

168 JUAN FRANCISCO MAURA

der la postura ideoloacutegica de esta gran mujer si tienen en cuenta ademaacutes de los factores antes mencionados otros tantos de caraacutecter biograacutefico concernientes a su educacioacuten y matrimonio

Otra escritora fue la mexicana dontildea Mariacutea Casilda Pozo natural de Temestla (Meacutexi-co) Nacida en el mes de abril de 1682 dejoacute escrita su biografiacutea en 16 cuadernos el ma-nuscrito original se encuentra en la biblioteca del colegio de San Gregorio de Meacutexico Fue su confesor el jesuiacuteta Domingo Quiroga que fue quieacuten la incitoacute a escribir su obra (Serrano y Sanz 270 137) Sor Juana de San Antonio aparece a principios del siglo XVII formando parte de un grupo de religiosas espantildeolas que fueron a Manila por la ruta de Meacutexico Ademaacutes de distinguirse por sus cualidades personales su obra interesa por ofrecer informacioacuten testimonial y costumbrista acerca de la forma de vestir de chinos y japoneses (Serrano y Sanz 270 225)

Otra monja esta vez ecuatoriana fue Gertrudis de San Ildefonso Nacida en 1652 profesoacute su vocacioacuten en el convento de Santa Cruz de Quito dejando escrita su vida por mandato de su confesor el padre Martiacuten de la Cruz el cual hizo una biografiacutea laquoen tres gruesos voluacutemenesraquo Gertrudis de San Ildefonso murioacute en 1709 (Serrano y Sanz 270 300) en olor de santidad

Sor Mariacutea Ana Agueda de San Ignacio nacioacute el 3 de marzo de 1695 en la dioacutecesis de la puebla de los Angeles en un rancho del lugar de Santiago Tecaliacute (Serrano y Sanz 270300) Esta monja mexicana escribioacute varias obras durante su vida conventual a lo largo de la cual desempentildeoacute el cargo de priora por muchos antildeos Entre sus obras todas de caraacutecter piacuteo y de laquoamor divinoraquo escribioacute un curioso y laquocopiosoraquo tratado de la Leche virginal de la Soberana Madre de Dios El padre Fr Juan de Villa Saacutenchez hace el siguiente comentario al respecto laquoen que hablando primero en sentido natural de los beneficios que debemos a Nuestra Sentildeora pasa a tratar en sentido miacutestico y alegoacuterico enten-diendo en la leche la doctrinaraquo (Serrano y Sanz 270301) Mexicana fue tambieacuten Sor Petronila de San Joseacute que ejercioacute como abadesa del Real monasterio de Jesuacutes Mariacutea de la ciudad de Meacutexico Escribioacute Vidas de varias religiosas ejemplares obra que tiene su im-portancia ya que al parecer laquoDe esta obra se sirvioacute D Carlos de Siguumlenza y Goacutengora para escribir su Parayso Occidental (Meacutexico 1684) seguacuten eacutel mismo declara en el proacutelogo diciendo lsquoa quien si hay algo bueno en esta historia se le debe todorsquoraquo (Serrano y Sanz 270 354) Menos conocida fue su compatriota Sor Luisa de Santa Catalina natural de Xacona laquopueblo situado en las inmediaciones de Zamora (Meacutexico)raquo siendo bautizada en 1682 Escribioacute Cartas espirituales a su confesor el P Juan Loacutepez de Aguado (Serrano y Sanz 270 361-62)146

Todos estos escritos la mayoriacutea de ellos ignorados por el gran puacuteblico tienen la im-portancia de darnos una perspectiva diferente En otras palabras ensentildearnos la maacutes refinada sensibilidad de muchas mujeres que permanecieron y en su mayoriacutea siguen permaneciendo a laquooscurasraquo de una eacutepoca tan rica de la literatura espantildeola como fue el Siglo de Oro Este siglo fue tambieacuten en su dimensioacuten literaria y artiacutestica patrimonio de la mujer

146 Para profundizar en muchas de estas escritoras hispano-americanas la consulta de la Biblioteca Hispano-Americana de Beristain de Souza resulta de capital importancia

169ESPANtildeOLAS DE ULTRAMAR EN LA HISTORIA Y EN LA LITERATURA

Sor Nada ardores divinos de una monja adolescente escritos ineacutedi-tos de una recieacuten profesa del siglo XVI147

iexclQueacute encantadores son tus amores hermana miacutea espo-sa iexclQueacute deliciosos son tus amores maacutes que el vino Y el aroma de tus perfumes es mejor que el de los baacutelsamos Miel virgen destilan tus labios esposa miel y leche hay en tu lengua y el perfume de tus vestidos es como aroma de incienso (Cantar de los Cantares 4 10-11)

Sor Nada llamada asiacute por humildad seguacuten dice el Indice de manuscritos de la Biblio-teca Nacional de Madrid es uno de los ejemplos maacutes desconocidos e interesantes que tenemos de la poesiacutea y prosa amoroso-religiosa del siglo XVII Hasta la fecha nunca se habiacutea publicado su obra e incluso hasta el antildeo 1995 para mi sorpresa no habiacutea copias microfilmadas de sus manuscritos en la Biblioteca Nacional Serrano y Sanz en su libro Apuntes para una Biblioteca de Escritoras Espantildeolas hace una escueta y pasajera mencioacuten de esta mujer y de su obra (68-69) siendo eso todo lo que hasta ahora se sabiacutea de ella Sus escritos consisten en los siguientes manuscritos

1 laquoEn queacute consiste un verdadero amor de Diosraquo 9 hojas uacutetiles en 4ordm letra del siglo XVII Biblioteca Nacional de Espantildea Manuscrito 1295926

2 laquoPintura del Propio Amorraquo laquoPintura del propio Amorraquo 10 hojas uacutetiles en 4ordm letra del siglo XVII Biblioteca Nacional de Espantildea Manuscrito 1295927

3 laquoEsplicacioacuten sobre en queacute consiste la paz del Almaraquo laquoQuartillas aacute un Alma que padece soledad interiorraquo 7 hojas uacutetiles en 4ordm letra del siglo XVII Biblioteca Nacio-nal de Espantildea Manuscrito 1295828

En cuanto a su persona soacutelo se nos dice que laquose encubrioacute con este seudoacutenimo laquoSor Nadaraquo Esta monja desconocida de origen hispanoamericano posee toda la frescura e ingenuidad de una joven apasionada metida por vocacioacuten u obligacioacuten a ejercer la profesioacuten maacutes comuacuten para mujeres de cierta clase social de su tiempo En sus liacuteneas podemos encontrar un misticismo simple incluso en algunos momentos infantil pero a su vez lleno de una fuerza y sensualidad interior poco comuacuten en escritos de este geacute-nero que desborda los liacutemites del laquoamor divinoraquo a traveacutes de los diaacutelogos entre el Alma y el Esposo Sor Nada consigue proyectar su amor a Dios maacutes allaacute de una experiencia romaacutentica Su experiencia es sincera y genuinamente miacutestica trascendiendo la imita-cioacuten o la propia creacioacuten poeacutetica ficcionalizada (Hatzfeld 30) Algunos pasajes son de un

147 Veacutease mi artiacuteculo Sor Nada ardores divinos de una monja adolescente escritos ineacuteditos de una monja profesa del siglo XVIIraquo Espeacuteculo Revista de estudios literarios 26 (2004) 1-10 Universidad Complutense de Madrid http wwwucmesinfoespeculonumero26sornadahtml

170 JUAN FRANCISCO MAURA

alto contenido eroacutetico con sustantivos y metaacuteforas que recuerdan la maacutes iacutentima unioacuten amorosa en unos casos y el tierno amor maternal en otros

[T]e miro Jesus mio desnudo a las inclemencias del tiempo y ardien-do en puro fuego de Amor por la salud de las Almas y me ensentildeas a que te ame con todo mi corason y puresa de espiritu No atendiendo ni buscando umanos intereses ni a solisitar consuelos ni regalos espi-rituales que suelen empantildear la puresa del noble corason No mi Jesus amable pues antes me ensentildeaste tu puro Amor que desnudo sean [sic] de encaminar mis passos desde el pesebre asta la cuna en donde te miro tan desnudo como el pesebre y todo Sentildeor por mi Amor (Mss 12959 26 hoja 1 v)

El manuscrito (12959 27) de la mencionada serie de tres contiene algunas correccio-nes quizaacute hechas por el confesor o quizaacute por ella misma cuando se dirige con excesiva familiaridad y arrebatado fervor a su Amado148 He escogido el manuscrito (12959 Caja 28) en primer lugar por ser el ejemplo maacutes representativo de su poesiacutea y prosa En este manuscrito encontramos de forma maacutes directa que alegoacuterica toda la frescura de un diaacutelogo entre Jesuacutes y el alma que raya como diriacutea Cervantes laquoa la llana y sin rodeosraquo (667 lib 2 cap 38) con el doloroso y a veces desesperado deseo de la entrega y la unioacuten final con el Amado La ortografiacutea no ha sido corregida respetaacutendose el texto ori-ginal149 Veamos el siguiente fragmento

Mira que te amo con Amor de padre y con Amor de esposo el mas fino y puro enamorado que no tan solo me presio de darte mi mano sino tambien todo mi cuerpo y sangre para que con mi pan de vida te sustentes y te regales a tus anchuras y que con mi propio espiritu vivas en paz como tu lo deseas y que mis amores sean unico alivio en tus trabajos en esta mortal vida pues si esto es asi y sabes que muero por darte vida dime esposa mia de que te fatigas Dame querida tus bras-sos y dime si me amas como yo te amo (Hoja 4)

148 La antologiacutea de Promis ha procurado insertar entre los textos antoloacutegicos algunos que se refieren a la es-critura de mujeres fundamentalmente de aquellos generados en el interior de los espacios conventuales Estos textos se fundan como laquohistorias de vidasraquo y responden casi siempre a los requerimientos de los confesores de las monjas coloniales En este sentido resulta valiosiacutesima la incorporacioacuten de la llamada Relacioacuten autobiograacute-fica de Sor Ursula Suaacuterez como una muestra significativa de la escritura monjil entendida en esta eacutepoca (como tambieacuten en la tradicioacuten europea medieval) inserta en las denominadas laquolabores de manoraquo de las religiosas ya que el texto escrito por mandato se convertiacutea en una suerte de entramado o tejido linguumliacutestico es decir en un nuevo bordado que la mayor parte de las veces el confesor convertido en censor iba haciendo tachando y enmendando En la antologiacutea Promis agrega un texto de Sor Tadea Garciacutea de la Huerta titulado Relacioacuten de la inundacioacuten que hizo el riacuteo Mapocho de la ciudad de Santiago de Chile en el monasterio de Carmelitas titular de San Rafael el diacutea 16 de junio de 1783 se trata de un poema tipo romance escrito en versos octosilaacutebicos y que da cuenta de lo sucedido ese diacutea en el convento (Resentildea de la literatura del reino de Chile de Joseacute Promis Eddie Morales Pintildea httpwwwupaclpublicaciones2002literatura_promishtm)

149 Son frecuentes las faltas ortograacuteficas Una de ellas es el uso constante del seseo La ausencia de acentua-cioacuten y puntuacioacuten exceptuando alguacuten punto o coma arbitrario no seguido casi nunca de mayuacutescula inicial lo mismo que el uso igualmente aribitrario de la h o de b v r q g j m n x etc No olvidemos de la misma forma la laxitud linguumliacutestica existente en el siglo XVII (no sabemos a queacute parte de eacuteste pertenece el manuscrito) asiacute como la joven edad de la monja

171ESPANtildeOLAS DE ULTRAMAR EN LA HISTORIA Y EN LA LITERATURA

Los versos del presente manuscrito poseen la misma fuerza que tiene su prosa Con una estructura estroacutefica indefinida estaacuten aparentemente corregidos por alguien que tu-vo la oportunidad de conocer personalmente a la autora Muy probablemente se trate del padre al que hace referencia al principio del primer manuscrito laquoMandame el Pd que le declare en que consiste un verdadero amor a Diosraquo a continuacioacuten continuacutea con su caracteriacutestica humildad laquo[O]bedesere y dire lo q Dios me inspire segun mi rudesa y simplisidadraquo (Mss 12959 26) En cuanto a la fuerza pasional de esta joven observamos con cierta tristeza coacutemo aparece sublimada en sus escritos con toda la enegiacutea de una joven mujer llena de intensidad y vida pero encerrada en los liacutemites de un convento Veamos un ejemplo en donde responde el Alma en los siguientes versos

O mi enamorado Jesus O mi dulse y tierno amanteO alegria de los sielos O dulse Jesus amable

(Toda Sentildeor me derrito toda Sentildeor me desagoy quiero vivir por ti ea sentildeor abrasadme) [Tachado en el original]

Toda Sentildeor me derrito toda Sentildeor me desagoy quiero morir por vos ea Sentildeor que ya acabo

Ya tus amores me llaman ya tus perfumes me traencon suspiros y agonias Sentildeor hasta que te alcanse

O mi Jesus amoroso no puedo mas dilatarmeya la pasiensia me falta dulse Jesus abrasadme

(No puedo vivir sin vos no puedo mas dilatarmeya la pasiensia me falta dulse) [Tachado en el original]

No puedo vivir sin vos mi dulse Jesus amablepues me teneis echisada siendo mi esposo y mi Padre

Ay que me abraso Ay que me quemo del Amor deJesus nasareno como no tocan y tantildeen a fuego150

Estos versos llenos de arrebato sublimado conectan con toda la tradicioacuten miacutestica es-pantildeola que se remonta a Ramoacuten Llul y que culmina en el maacutes universal de nuestros

150 En toda la fuerza y simbologiacutea del amor maacutes iacutentimo del maacutes alto y sublime placer de la unioacuten de los amantes tal como lo encontramos en el Cantar de los Cantares y en San Juan de la Cruz Leemos en la Biblia

Ya me he quitado la tuacutenica iquestCoacutemo volver a vestirme Ya me he lavado los pies iquestCoacutemo volver a ensuciarlosMi amado metioacute su mano por el agujero (de la llave) y mis entrantildeas se estremecieron por eacutel Me levanteacute para abrir a mi amado Mis manos destilaron mirra y mis dedos mirra exquisita en el pestillo de la cerradura (5 3-5)

Nos ocurre lo mismo con San Juan de la Cruz en su insuperable poema laquoLlama de amor vivaraquo

iexclOh cauterio suaveiexclOh regalada llagaiexclOh mano blanda iexclOh toque delicadoque a vida eterna sabey toda deuda pagaMatando muerte en vida la has trocado

172 JUAN FRANCISCO MAURA

miacutesticos San Juan de la Cruz Esta tradicioacuten se extiende hasta finales del siglo XVII esto es hasta los finales del Barroco siendo un poco maacutes tardiacuteo en la Ameacuterica espantildeola Sin tener como propoacutesito discutir en el presente trabajo a queacute corriente miacutestica pertenece la obra de Sor Nada es necesario resaltar no obstante el hecho de que estaacute escrito por una mujer y ademaacutes de tierna edad El manuscrito 12959 Caja 26 termina con estas pa-labras laquo[T]odas estas boverias escrivi por entretenimiento siendo resien profesa en la religion Sor Nadaraquo Mas no por la juventud de su autora los escritos dejan de tener lo-gradas metaacuteforas imaacutegenes y siacutembolos sacados de la naturaleza La alegoriacutea de la unioacuten matrimonial poseeacute el fuego liacuterico de la maacutes apasionada de las relaciones amorosas vivi-ficada por perfumes flores insectos animales escarchas nieves o abrojos Por lo tanto aunque la narracioacuten destile cierta ingenuidad no carece por ello de un vocabulario rico con el sabor popular de la poesiacutea de los cancioneros y romances de tradicioacuten renacen-tista No ha sido otra mi intencioacuten que la de rescatar del olvido unos escritos en prosa y en verso llenos de frescura y espontaneidad que nos muestran la pasioacuten con que la joven novicia se laquoentrega en cuerpo y almaraquo a los menesteres de su profesioacuten guiada por un padre espiritual en esos primeros antildeos de formacioacuten Esta ha sido la razoacuten por la que presento a continuacioacuten el citado manuscrito en su totalidad

Sor Nada (Mss 1295928)

laquoEsplicacion sobre en que consiste la paz del AlmaraquolaquoQuartillas a un Alma que padece soledad interiorraquo

[7 hojas utiles en 4ordm letra del siglo XVII]

+

Esplicacion sobre en que consiste la paz del Alma

Pareseme segun mi rudo entender que la verdadera paz del Alma con-siste en una muy pura y buena consiencia en un corason liso y bien intensionado en una verdadera rectitud de espiritu en el qual el Alma procura bolar a Dios sin jamas detenerse a respetos umanos ni reparar en que me diran ni de que me censuraran sino me apresuro a seguir a unos entenderes y pareseres dorados en los quales pretende el mundo engantildear y ensuciar si se puede la puresa de un corason unicamente de Dios y de su Santa ley y se lo conserva cristalino con la divina asis-tencia de la gracia y comprendido de su Amor y temor siguiendo la luz divina de tan amante Sentildeor Dios y ombre verdadero con que este ilustrado corason ni se altera ni se mueve por los disfrasses dorados que ase el mundo y sus moradores mayormente con falssas amistades aunque con ellos muestre buena intension Con la misma grasia y luz de Dios conose el buen corason estos disfrasses que le ase el mundo y se retira de todo con espiritu y valor esto sin la menor alterasion sino que en suma paz se retira a buscar a Dios dentro de su mismo corason

173ESPANtildeOLAS DE ULTRAMAR EN LA HISTORIA Y EN LA LITERATURA

y se abrasa con su pura verdad en la qual se le descubren mil interio-res secretos tan solidos puros y verdaderos que la misma Alma queda abismada y de puro grandes no los puede bien comprender ni esplicar pero estos mismos secretos divinos le sirven de espuelas para no solo correr sino bolar con pies de plumas en seguimiento de su bien ama-do Jesus y como este soberano Sentildeor es tan amante de sus espossas las Almas luego que la ve bolar con pies de plumas la sale al encuen-tro en despoblado campo que se deve de llamar Campo de Amor de Dios y el mismo Sentildeor se viene a las manos por ser Dios que nos ama con Amor infinito de Padre benigno y amoroso con que asiendose en contra deso este divino enamorado en lo interyor de el Alma que le busca con ansias de servirle y amarle y en aquella soledad traban una conversasion amorosa y sensilla como la pluma simple de quien esto escrive

Divino enquentroDios y el Alma en la soledad

O Soberano Principe de la paz dise el Alma tus perfumes me traen a ti bolando porque alla en el mundo y sus valedores me pretendian engantildear y entretenerme con pegaminossas amistades que facilmen-te me pudieran envenenar y matarme apartandome de ti Mi dulse Jesus amable mi Redentor Soberano que con tantas ansias me sales al enquentro como siervo [ciervo] erido de mis Amores los quales tu Amor me ofrese para que con tu mismo Amor te ame y te sirva en paz sin perturbarme ni contristarme ni cansarme de padeser pasando si se ofrese por escarchas nieves espinas ni abrojos ni por otros diverssos trabajos ni piedras de contradision que tu me puedes permitir pues por mas que el mar se levante con sus ferosses olas contra mi ni piedras se me tiren al rostro en todo Sentildeor me quieres con serenidad pasifica sin la menor perturbasion Todo Sentildeor quieres que lo tome con Serenidad de espiritu y asi vengo a ti bolando para que mejor me ensentildees a vivir segun las leyes de tu noble condision que me son muy agradables por mas que el mundo me las despresie por segir sus vanidades y torsidas intensiones con apariensias de bien y con este engantildeo y bien me quie-ro mas a mi que no a mi proximo veo que segun mi pareser se pierden muchas Almas y tambien de aquellos que se depresian y pasan por muy espirituales Con que me paresen pocos los que llegan a padeser con desnudes151 de espiritu por tu purisimo Amor y me parese essas se quedan muy atrasadas en la virtud por el peligro de bolver muy atras el paso de modo que se pueden despentildear y pereser en su misma desgra-sia ya por soberbia o por otras enfermedades que se les pega al corason y asi lo pasan como siegos ignorantes sin advertir en sus peligros

151 La letra en cursiva es miacutea

174 JUAN FRANCISCO MAURA

este aquerdo Sentildeor y otros que tu verdad me ensentildea me ase venir uyendo de las paredes del mundo y me vengo a ti Dios mio bolando con las dos Alas del Amor y temor que tu mismo Amor me ofrese tan de gracia y tan de grado que no se duentildeo mio con que lo responder a tan soberano beneficio y finesa de tus entrantildeas de Amorvengo Sentildeor y esposo mio unicamente a descansar en ti pues los peli-gros del camino me an puesto en mucho sobresalto temiendo el per-derte y sin ti perderme para siempre por una eternidad sin fin pues deseo amado mio ganarme ganandote a ti y vivir en ti aora en vida y despues eternamente y estos cuidados me traen fatigada molida y cansada y no podre tener alivio y descanso sino viendome entre tus brassos aunque sea estando en cruz pues ese es el fin de mis deseos vivir y morir en ti ablame mi cordero manso y ensentildeame a que ver-daderamente te ame como fiel esposa ea mi caro amigo dame la ma-no pues sabes Amor mio que en mi no ay mano sin tu misma mano y asi mi Dios y Sentildeor mi Principe Soberano con umilde rendimiento y deseos de alcansarte te suplico me des la mano y me consueles en estos mis trabajos Deseo Sentildeor vivir en paz y los malos amores de mi Naturaleza flaca no me dejan detentar y no quieren por mi desgrasia atropellar con las leyes de tu Amor ni quisiera perturbar mi corason quando me veo con un torvellino de olas y contratiempos que a menu-do me suelen sercar pero si tu Sentildeor me das la mano nada temo sino que me aseguro y vivire en paz sin que me fatiguen los contratiempos pues mi mano en la tuya y mi espiritu en el tuyo por mas borrascas que me envistan no seran bastantes para rendir mi voluntad a la suya bien si para pronunsiar un fiat que resuene bien atras en tus oidos y que en medio de mis fatigas me ponga a cantar tus divinas misericor-dias hea Sentildeor ya pretendo serrar mis labios por no desir mas bove-rias y deseo Sentildeor oir tus palabras de vida eterna abla Sentildeor que tu sierva oye con atension y cuydado mira mi Dios que se me ase tarde y espero con prisa deseando saborearme y aprovecharme de los ecos de tu Santa dotrina pues todas tus palabras saben a eterna vida callen pues mis sentidos y potensias y todo se ponga en paz pues mi dulse y soberano Sentildeor no se escusara de ablar me aun que en mudo silensio hea mi gran Prinsipe de la paz ablame que tus puros amores me traen perdida por estos asperos montes y mis cortos pasos no te pueden dar alcanse mirame mi Dios a tus pies postrada como un vil gusano y me-nor ormiga de la tierraabla Jesus y dise a su esposa el Alma querida esposa mia que me pides y por que te muestras tan fatigada y mal sufrida no vives como corde-rita del campo buscando de mis pechos el sustancial pasto mi Amor no te sustenta y mi grasia te promete eterna vida pues dime amada de que te fatigas y te muestras mal sufrida mira que te amo con Amor de padre y con Amor de esposo el mas fino y puro enamorado que no tan solo me presio de darte mi mano sino tambien todo mi cuerpo y

175ESPANtildeOLAS DE ULTRAMAR EN LA HISTORIA Y EN LA LITERATURA

sangre para que con mi pan de vida te sustentes y te regales a tus an-churas y que con mi propio espiritu vivas en paz como tu lo deseas y que mis amores sean unico alivio en tus trabajos en esta mortal vida pues si esto es asi y sabes que muero por darte vida dime esposa mia de que te fatigas Dame querida tus brassos y dime si me amas como yo te amoResponde el Alma152 Tu mi Dios sabes si yo te amo pues de mi solo se que mis deseos y ansias buelan a ti mas no alcanso a saber si te amo como tu de-seas ser amado y como desconfio tanto de mi y de mis prosederes falssos temo Dios mio perderme y perderte y asi Sentildeor pues no desechas mis Amores y te muestras tan fino en amarme te pido me ensentildees a vivir segun las leyes de tu pura verdad y fina condisionhija mia dise Dios la prueva de un verdadero Amor consiste en sufrir callar y padeser por mi unico Amor y en todo seguir mis pasos sin ja-mas retroseder por mas fragoso que se muestre el camino pues nunca seran tantas las espinas las escarchas ni las nieves ni los vientos bo-rrascosos que te se ofrescan pasar por mi Amor como los que mi tierno y desinteresado Amor paso por ti y siempre con mis pies descalssos y asi hija y esposa mia muestrate costante en seguir lo perfecto de mis passos pues mi braso fuerte sera en ti y peleara por ti y te sera el todo en tus nesesidades y mi Amor te convertira en dulse y suave lo amargo y molesto a la condision de la carrne

Responde el Alma

O mi enamorado Jesus O mi dulse y tierno amanteO alegria de los sielos O dulse Jesus amable

(Toda Sentildeor me derrito toda Sentildeor me desagoy quiero vivir por ti ea sentildeor abrasadme) [Tachado en el original]

Toda Sentildeor me derrito toda Sentildeor me desagoy quiero morir por vos ea Sentildeor que ya acabo

Ya tus amores me llaman ya tus perfumes me traencon suspiros y agonias Sentildeor asta que te alcanse

O mi Jesus amoroso no puedo mas dilatarmeya la pasiensia me falta dulse Jesus abrasadme

(No puedo vivir sin vos no puedo mas dilatarmeya la pasiensia me falta dulse) [Tachado en el original]

No puedo vivir sin vos mi dulse Jesus amablepues me teneis echisada siendo mi esposo y mi Padre

152 La aparicioacuten de una mayuacutescula al principio de una oracioacuten es algo totalmente arbitrario en este ma-nuscrito dada la libertad ortograacutefica de la autora Como se puede observar en la mayor parte de las veces no es el caso

176 JUAN FRANCISCO MAURA

Ay que me abraso Ay que me quemo del Amor deJesus nasareno como no tocan y tantildeen a fuego

Responde Jesus Hija mia tus simples vozes oygo y aunque resuenan bien a mis oidos pero te deseo mas mansa y pasifica en tus fervores ya sabes que no siempre as de vivir en mantillas ni a los pechos de tu Madre por que es rason que padescas con espiritu fuerte como mu-jer valerosa por que a una esposa del Rey soberano y prinsipe de la paz no le estan bien chiquerias ni fervores de nintildea malcriada y ya es ora que la destete su Madre la Naturaleza y que empesando su nueva vida camine con el favor de mi grasia sigiendo mis passos de eterna vida esto con sus pies descalssos segun mis leyes de Amor puro y desinteresado lo tienen ordenado153 y vivir en paz como lo deje en-cargado a mis apostoles Santos repitiendoles varias vezes Vivir en pas y caridad esto es un vivir en Dios y Dios en el Alma y asi hija mia el Alma que vive en paz vive en mi Como mis cortesanos en el cielo y pues me pides que te ensentildee a vivir segun las leyes de mi condision Repito el desir que te debes mostrar sufrida en todo tiempo y estado sin permitir en tu corason que ni aun los fervores se adelanten con estremos ni ademanes sino atiende y aprende de mi purisima Madre pues siempre la veras si bien lo consideras que mientras vivio en el mundo en todos sus trabajos se mostro firme fuerte costante como piedra diamante Pues mirandome nintildeo entre sus brasos desnudo en el pesebre desnudo y crusificado en los brassos de una cruz En estos y otros passos no se mudo su rostro sino que en suma serenidad y pasifico corason toda se sacrificaba enteramente en los brassos de mi Amor y rendido su corason y voluntad en la de mi eterno Padre por ejemplo te la doy y deseo que aprendas de sus nobles calidades pues te aseguro carisima que las leyes de mi condision y pura verdad todo lo allaras enserrado en el corason de mi purisima Madre sedle fiel y descansaras en paz

+

Quartillas a un alma que padese soledad interior

1Un Alma afligida y tristese ve en un campo desiertay en el su esposo la tieneAtormentada y sedienta

153 Es a traveacutes de estas liacuteneas lo que hace suponer que la autora de este diaacutelogo amoroso entre el Alma y Je-suacutes es novicia esto es laquoque estaacute empesando su nueva vidaraquo En las mismas liacuteneas una vez maacutes se hace alusioacuten al laquodesteteraquo de su vida civil laquoa una esposa del Rey soberano y principe de la paz no le estan bien chiquerias ni fervores de nintildea malcriada y ya es ora que la destete su Madre la naturalesaraquo (fol 5)

177ESPANtildeOLAS DE ULTRAMAR EN LA HISTORIA Y EN LA LITERATURA

2Pendiente se ve en el AyreSolo un hilo la sustentasin tocar el pie en el sueloporque del no tome tierra

3Mirandola esta yto a ytoaquel sol que la atraviesay la enviste con sus rayosmas ella no pestantildeea

4Como sigarra padese y como a tal se atormentabatiendo sus mismas Alasy el corason se atraviesa

5Con penas sustos temoresquando se mira assi mesmasin tener valor en nadaporque es la misma flaquesa

6Pero el Amor de su esposotoda su atension le llevay la pone en un abismopero cubierto en tiniebla

7Desea dar algun bueloy subir con ligeresapero se mira travadacon una fuerte cadena

8Clama suspira y padeseMas del todo se sujetaRindiendo su voluntadA la divina clemencia

9Los enemigos del AlmaCruelmente le asen guerray ella aunque firme y constantelos reselos la atormentan

178 JUAN FRANCISCO MAURA

10de todos modos padeseaunque gosa la asistensiadel divino esposo amadoque en su interior se recrea

11Solo de verla penary con verla tan serenadise resibe mil gustosde su sigarra pequentildea

12Le sabe el mundo a mil yelesy su trato le atormentaviendo en el mil falsedadesque todas saben a tierra

13Para poderse librardeja de correr y buelacon las Alas del Amory el mismo Amor se la lleva

Una vida dedicada a un amor divino un amor que le haraacute llenar un buen nuacutemero de cuartillas dedicadas a tan alta empresa Se desconoce si la vocacioacuten de Sor Nada con-tinuoacute con tanta intensidad el resto de sus diacuteas Ciertamente la vida en el covento no era faacutecil En algunos casos la experiencia era traumaacutetica incluso fatal para algunas de las adolescentes de la Ameacuterica Espantildeola Las reglas del claustro eran severas por varias razones Estas joacutevenes si no teniacutean el permiso de la superiora no podiacutean recibir visitas no podiacutean volver a sus casas su correspondencia era censuraba y no podiacutean salir del periacutemetro conventual Igualmente se levantaban antes del amanecer para oir misa tra-bajaban el resto del diacutea y lo maacutes interesante es que muchas veces esta vida era aceptada por muchas

Page 30: Tercera parte: Mujeres en la vida intelectual - …parnaseo.uv.es/Editorial/Maura/TerceraParte.pdf · La Biblia, por su parte, hace repetidas menciones de la mujer y sobre el comporta-

160 JUAN FRANCISCO MAURA

giones que intentaban vanamente erradicar algo tan intriacutenseco al ser humano como a cualquier otra especie animal Esta preocupacioacuten se acentuoacute mucho maacutes en el Nuevo Mundo donde muchas sociedades tribales no veiacutean a la mujer como parte integrante de su propiedad privada La razoacuten es obviamente socioloacutegica y ha existido desde el principio de los tiempos en las civilizaciones maacutes primitivas laquoNo desearaacutes a la mujer del proacutejimoraquo El quebrantar este precepto equivaldriacutea a desestabilizar desde su base a la sociedad judeo-cristiana fundamentada en la familia Las penas aplicadas en estas transgresiones seraacuten lo suficientemente severas como para marginar socialmente mdashen el mejor de los casosmdash a aquellos que las pongan en praacutectica Siendo la mujer la encar-gada por la naturaleza de trasmitir la descendencia de la especie su libertad sexual se veraacute limitada por el peligro de quedar embarazada cada vez que ignore tal elemental precepto140

Primeras escritoras del Nuevo Mundo

Contra cuerdos y contra locos estaacute obligado cualquier caballero andante a volver por la honra de las mujeres cualesquiera que sean Cuanto maacutes por las reinas de tan alta guisa y pro como fue la reina Madaacutesima a quien yo tengo particular aficioacuten por sus buenas partes porque fuera de haber sido fermosa ademaacutes fue muy prudente y muy sufrida en sus calamidades que las tuvo muchas (Cervantes Don Quijote)

Fueron varias las escritoras que durante los siglos XVI y XVII tuvieron una relacioacuten di-recta o indirecta con el Nuevo Mundo Muchas de ellas eligieron la vida monaacutestica mdashen algunos casos como refugio huyendo de sus maridosmdash uacutenica salida en una estructura social en donde no eran muchas las opciones especialmente en una eacutepoca donde el fac-tor religioso pesaba casi tanto como el econoacutemico pero sobre todo para dedicarse a una vida espiritual difiacutecilmente alcanzable en otras circunstancias Mariloacute Vigil apunta que las monjas que lo eran por su propia voluntad ademaacutes de tener inquietudes religiosas tambieacuten las teniacutean intelectuales como es el caso de la escritora miacutestica espantildeola Santa Teresa de Jesuacutes (1515-1582) que ademaacutes de tener una de las vidas maacutes interesantes que se conozcan supo sacar tiempo para escribir las maacutes bellas manifestaciones de la poesiacutea liacuterica y sobre todo de la prosa castellana (Vigil 237-38) Cada una de estas mujeres de-dicadas a la vida literaria y espiritual de su tiempo se merece muchiacutesimo maacutes espacio del que se les pueda ofrecer en estas pocas liacuteneas No obstante con estas pasajeras men-

140 Aunque afortunadamente las cosas han cambiado para la mujer no se debe dejar de mencionar la can-tidad de abusos sexuales de la que es viacutectima en la sociedad moderna

161ESPANtildeOLAS DE ULTRAMAR EN LA HISTORIA Y EN LA LITERATURA

ciones se espera al menos incluirlas y poder despertar el suficiente intereacutes para que sus vidas y sus obras no sigan sumergidas en las simas del olvido Para que estas mujeres de la iglesia pudiesen satisfacer su curiosidad cognoscitiva era necesario romper todas aquellas barreras que supusiesen un estorbo o una restriccioacuten a la hora de investigar consultar o hablar con cualquier persona religiosa de cualquier orden o secular ya fue-se obispo o cleacuterigo Las posiciones intelectuales entre las diferentes oacuterdenes religiosas fueron muy dispares como bien es sabido No eran iguales los planteamientos teoloacute-gicos de los dominicos que los de los franciscanos o los de los carmelitas que los de los agustinos o jesuitas Era necesario por lo tanto tener acceso a estas fuentes de informa-cioacuten para poder constrastar las diferencias y hacer valoraciones propias (Vigil 237-38) El escritor espantildeol Caro Baroja destaca el caraacutecter enciclopeacutedico del catolicismo donde se han integrado corrientes y posturas muy dispares que a traveacutes del diaacutelogo daban cierto espacio al creyente con maacutes curiosidad intelectual para que este pudiese compa-rar y valorar las diferentes opciones que se le ofreciacutean (Vigil 237-38)

Varias de estas mujeres intelectuales fueron hijas de conquistadores que aunque na-cidas en suelo americano seguiacutean expresaacutendose en la lengua de sus padres con no me-nos fuerza que sus contemporaacuteneas peninsulares Es cierto que existieron numerosas escritoras en el Nuevo Mundo durante el siglo XVIII algunas dedicadas incluso al estudio de las matemaacuteticas como la mexicana Dontildea Francisca Gonzaga y Castillo Pero para limitar el presente trabajo a los siglos XVI y XVII uacutenicamente se incluiraacuten ejemplos de estos dos siglos

La peruana Josefa de Alarcoacuten publicoacute en 1648 unas liras dedicadas a las Exequias del Priacutencipe Baltasar Carlos

Cifro en capilla breveEl tribunal de la Magestad maacutes graveEn fe de lo que debeA Carlos que en dos mundos no cabe141

El caso de Sor Jeroacutenima de la Asuncioacuten es muy interesante una mujer que tuvo la oportunidad de viajar a Meacutexico y posteriormente a las Filipinas para cumplir con las mi-siones que le habiacutean sido encomendadas por su orden Nacida en Toledo en 1555 en el seno de una noble y acaudalada familia estuvo destinada a recorrer el mundo ofrecien-do sus servicios a todos los necesitados distinguieacutendose por su ardiente caridad laquovien-do que los galeotes eran tratados con dureza excesiva sobre todo cuando los llevaban de un pueblo a otro procuroacute aliviar las penas de aquellos desgraciados y lo consiguioacute en parteraquo (Serrano y Sanz 268 65) Hija del licenciado e ilustre jurista Pedro Garciacutea Yaacute-ntildeez y de dontildea Catalina de la Fuente ingresoacute contra su voluntad en el monasterio de las Clarisas de Santa Isabel de los Reyes (Toledo) el 5 de agosto de 1570 (Trevintildeo 46) hay que decir que eacutesta no seraacute la uacutenica voluntad contra la que tuvo que luchar

Sor Jeroacutenima se embarcoacute para Meacutexico y de alliacute partioacute hacia Manila junto con siete compantildeeras en el famoso laquoGaleoacuten de Manilaraquo que saliacutea anualmente del puerto mexi-cano de Acapulco Su viaje a las Filipinas duroacute un antildeo y tres meses desde su salida de Espantildea tiempo en el que demostroacute un gran valor y determinacioacuten por el soacutelo hecho de

141 Manuel Serrano y Sanz Apuntes para una biblioteca de escritoras espantildeolas desde el antildeo 1401 al 1833 vols 268 269 270 271 Biblioteca de Autores Espantildeoles (Madrid Atlas 1975) 268 19

162 JUAN FRANCISCO MAURA

embarcarse en tan precarias naves Fue la primera misionera de Oceaniacutea muriendo en Manila en 1621 Alliacute fundoacute el monasterio de Santa Clara que perviviriacutea hasta ser bom-bardeado en la Segunda Guerra Mundial (Trevintildeo 47) Escribioacute su Vida donde trata de la fundacioacuten del convento y de todas las tribulaciones mdashllegoacute a ser excomulgadamdash y satisfacciones que una vida dedicada a una causa justa proporciona Tambieacuten escribioacute una obra de caraacutecter filosoacutefico-teoloacutegico titulada Carta de marear en el mar del mundo nombre alegoacuterico que da cuenta de la enorme distancia recorrida a traveacutes del laquomar del espiacuterituraquo por sor Jeroacutenima He aquiacute algunos de sus versos de caraacutecter religioso

Vuestra soy para vos naciacuteiquestQueacute mandaacuteis hacer de miacute Inaccesible grandezaEterna Sabiduriacuteay bondad del alma miacuteaDios un ser poder y Altezamirad la suma pobrezade eacutesta que se ofrece aquiacuteiquestQueacute mandaacuteis hacer de miacute (Serrano y Sanz 268 66)

Ya en Meacutexico tenemos otro ejemplo de una mujer dedicada por completo a Dios y al estudio y composicioacuten de obras de caraacutecter teoloacutegico Dontildea Ana Mariacutea del Costa-do de Cristo nacida en la ciudad de Tlaxcala hacia el antildeo 1650 Tomoacute la orden de San Francisco para consagrarse a las labores de su orden y a la escritura Se dice que con los escritos de Dontildea Ana Mariacutea se podriacutean formar veinte tomos (Serrano y Sanz 268 282) Estas son algunas de sus obras Vida y muerte de Jesucristo Nuestro Sentildeor Vida del Seraacutefico Padre San Francisco de Asiacutes Vida de la iacutenclita Virgen Santa Clara Vida del sutiliacutesimo doctor Juan Duns Escoto

Pero no todas las monjas tuvieron vidas tan dedicadas al estudio y la oracioacuten Loacutegica-mente entre un nuacutemero tan grande de mujeres existioacute de todo y seriacutea un error pensar que todos los conventos femeninos estaban integrados por laquocaacutendidas palomasraquo Una monja en el siglo XVI y XVII teniacutea mucha maacutes fuerza que una mujer ordinaria ya que actuaban en grupo y la entrada a los recintos donde viviacutean estaba permitida solo a mu-jeres Esta situacioacuten las haciacutea mucho maacutes fuertes a todos los niveles que una mujer sola protegida uacutenicamente por su familia laquoLas monjas durante los siglos XVI y XVII lucharon por eludir la clausura y por zafarse del control que los frailes de las secciones masculi-nas de sus congregaciones ejerciacutean sobre ellasraquo (Vigil 230) Soacutelo un antildeo maacutes tarde que dontildea Ana Mariacutea del Costado de Cristo en 1651 y a 12 leguas de Meacutexico nacioacute la sin par Sor Juana Ineacutes de la Cruz hija de don Pedro Manuel de Asbaje natural de Vergara (Vizcaya) y de Dontildea Isabel Ramiacuterez de Santillana hija de espantildeoles (Serrano y Sanz 268 289) Por ser sin lugar a dudas la poeta maacutes importante de su tiempo y probable-mente la maacutes conocida del mundo hispano no profundizaremos en ella Su obra es un canto a la inteligencia y el exponente maacutes destacado de la literatura barroca americana tanto en prosa como en verso Destacareacute simplemente que Sor Juana Ineacutes pese a vivir en un sociedad donde no eran excesivas las libertades concedidas a las mujeres tuvo el caraacutecter y la determinacioacuten de dejarnos las maacutes bellas poesiacuteas amorosas que si bien estuvieron enmarcadas en un ambiente religioso como era de esperar por su condicioacuten

163ESPANtildeOLAS DE ULTRAMAR EN LA HISTORIA Y EN LA LITERATURA

pudieron transcender como unas de las maacutes bellas manifestaciones literarias que hoy en diacutea se conservan Fue su agudeza mental sensibilidad y cultura tal que no fueron suficientes los soacutelidos muros del convento para contener el genio de tan extraordinaria mujer Recordemos sus conocidiacutesimos versos en defensa de las mujeres

Hombres necios que acusaacuteisa la mujer sin razoacutensin ver que sois la ocasioacutende lo mismo que culpaacuteis142

Las metaacuteforas y la delicadeza que emplea en rebatir a su obispo en su laquoRespuesta a sor Filotea de la Cruzraquo no son solamente el epiacutetome del feminismo de su tiempo sino una de las maacutes brillantes manifestaciones del barroco hispano Poesiacutea teatro ensayo y un conocimiento extraordinario de las ciencias claacutesicas de su tiempo hacen de esta mujer un ejemplo extraordinario de las letras universales Ya son cientos los artiacuteculos y libros que se han escrito sobre Sor Juana y no dejan de aparecer tesis doctorales sobre los maacutes diversos temas conectados con la citada autora143 Como nos dice Stephanie Merrim en su documentada obra Early Modern Womenrsquos Writing and Sor Juana Ineacutes de la Cruz

She wrote and published on secular themes as atypical for a nun as human love Her remarkably extensive writings essayed and reenacted most of the (male) poetic dramatic theological and even philosophi-cal discourses of her times in the metropolis making her works a com-pendium of baroque culture in its diversity and syncretism Sor Juana self-creation as a learned women effectively toppled many of the walls in which she was materially enclosed and positioned her within the dynamic world of early modern European culture (xii)

No se debe dejar de mencionar a otras escritoras novohispanas de la eacutepoca que aun-que no fueron tan proliacuteficas y relevantes como Juana Ineacutes de la Cruz dejaron testimo-nio de algunos acontecimientos que tienen intereacutes socioloacutegico o testimonial Este es el caso de Dontildea Mariacutea Estrada Medinilla de igual nombre y apellido que la mujer que acompantildeoacute a las tropas de Corteacutes en su primera entrada a Meacutexico Natural de Meacutexico publicoacute toda su obra a mediados del siglo XVII concentraacutendose principalmente en la lle-gada del Marqueacutes de Villena virrey y capitaacuten general de la Nueva Espantildea a la ciudad de Meacutexico en el antildeo 1640 Escrita en octavas reales la obra trata de las fiestas de toros y cantildeas con que se obsequioacute al citado virrey Fue impresa en Meacutexico en 1641 (Serrano y Sanz 269 402)

Mucho maacutes importante para el presente libro es Dontildea Isabel de Guevara que escribioacute en 1556 la carta en que se expone la ayuda que ofrecieron las mujeres en el descubri-miento y conquista del Riacuteo de la Plata No cabe la menor duda de que esta carta es uno

142 Para una mejor comprensioacuten del caraacutecter de esta excepcional mujer veacutease entre los numeros trabajos publicados Fredo Arias de la Canal Intento de psicoanaacutelisis de Juana Ineacutes y otros ensayos sorjuanistas (Meacutexico Frente de Afirmacioacuten Hispanista 1972) 47

143 Veacuteanse entre otros trabajos Octavio Paz Sor Juana Ineacutes de la Cruz o las trampas de la fe Georgina Sabat de Rivers En busca de Sor Juana Margo Glantz Sor Juana la comparacioacuten y la hipeacuterbole Gerard C Flynn Sor Juana Ineacutes de la Cruz Stephanie Merrim Feminist perspectives on Sor Juana Ineacutes de la Cruz Pamela Kirk Sor Juana Ineacutes de la Cruz religion art and feminism

164 JUAN FRANCISCO MAURA

de los documentos maacutes importantes con que contamos en relacioacuten a la aportacioacuten fe-menina en el proceso de la conquista de Ameacuterica Su importancia viene dada por varios factores Primero es uno de los primeros testimonios mdashsi no el primeromdash en donde se expone abiertamente la indispensable colaboracioacuten de las mujeres en el descubrimien-to y conquista de tierras en el Nuevo Mundo laquoQue si no fuera por ellas todos fueran acabadosraquo En segundo lugar la informacioacuten vertida en estas liacuteneas presenta en parte la manera de pensar de una mujer espantildeola en tales circunstancias Extraordinario tes-timonio de primera mano que nos da una idea de lo que significoacute en muchos casos el valor y entrega constantes de muchas de estas mujeres que auacuten a riesgo de perder sus vidas no dudaron en luchar al lado de los hombres por una causa que consideraban laquocomuacutenraquo

La relevancia histoacuterica de dicha carta hace que merezca ser transcrita en su totali-dad

Carta de dontildea Isabel de Guevara a la princesa gobernadora dontildea Juana exponiendo los trabajos hechos en el descubrimiento y conquista del Riacuteo de la Plata por las mujeres para ayudar a los hombres y pidiendo repartimiento

para su marido Asuncioacuten 2 de julio de 1556

Muy alta y muy poderosa sentildeora

A esta provincia del Riacuteo de la Plata con el primer gobernador de ella don Pedro de Mendoza hemos venido ciertas mujeres entre las cuales ha querido mi ventura que fuese yo la una y como la armada llegase al puerto de Buenos Aires con mil quinientos hombres y les faltase el bastimento fue tamantildea el hambre que a cabo de tres meses murie-ran los mil esta hambre fue tamantildea que ni la de Jerusalem se le puede igualar ni con otra ninguna se puede comparar Vinieron los hombres en tanta flaqueza que todos los trabajos cargaban de las pobres mu-jeres asiacute en lavarles las ropas como en curarles hacerles de comer lo poco que teniacutean limpiarlos hacer centinela rondar los fuegos armar las ballestas cuando algunas veces los indios les veniacutean a dar guerra hasta cometer a poner fuego en los versos y a levantar los soldados los que estaban para ello dar arma por el campo a voces sargentean-do y poniendo en orden los soldados porque en este tiempo como las mujeres nos sustentamos con poca comida no habiacuteamos caiacutedo en tanta flaqueza como los hombres Bien creeraacute V A que fue tanta la so-licitud que tuvieron que si no fuera por ellas todos fueran acabados y si no fuera por la honra de los hombres muchas maacutes cosas escribiera con verdad y los diera a ellos por testigos Esta relacioacuten bien creo que la escribiraacuten a V A maacutes largamente y por eso cesareacute Pasada esta tan peligrosa turbunada determinaron subir el riacuteo arriba asiacute flacos como estaban y en entrada de invierno en dos bergantines los pocos que quedaron vivos y las fatigadas mujeres los curaban y los miraban y les guisaban la comida trayendo la lentildea a cuestas fuera del naviacuteo y animaacutendolos con palabras varoniles que no se dejasen morir que presto dariacutean en tierra de comida metieacutendolos a cuestas en los

165ESPANtildeOLAS DE ULTRAMAR EN LA HISTORIA Y EN LA LITERATURA

bergantines con tanto amor como si fueran sus propios hijos Y como llegamos a una generacioacuten de indios que se llaman tinbues sentildeores de mucho pescado de nuevo los serviacuteamos en buscarles diversos modos de guisados porque no les diese en rostro el pescado a causa de que lo comiacutean sin pan y estaban muy flacos Despueacutes determinaron subir el Paranaacute arriba en demanda de bastimento en el cual viaje pasaron tanto trabajo las desdichadas mujeres milagrosamente quiso Dios que viviesen por ver que en ellas estaba la vida de ellos porque todos los servicios del naviacuteo los tomaban ellas tan a pechos que se teniacutea por afrentada la que menos haciacutea que otra sirviendo de marear la vela y gobernar el naviacuteo y sondar de proa y tomar el remo al soldado que no podiacutea bogar y escotar144 el naviacuteo y poniendo por delante a los soldados que no se desanimasen que para los hombres eran los trabajos verdad es que a estas cosas ellas no eran apremiadas ni las haciacutean de obliga-cioacuten ni las obligaba si solamente la caridad Asiacute llegaron a esta ciudad de la Asuncioacuten que aunque ahora estaacute muy feacutertil de bastimentos en-tonces estaba de ellos muy necesitada que fue necesario que las muje-res volviesen de nuevo a sus trabajos haciendo rosas con sus propias manos rosando y carpiendo y sembrando y recogiendo el bastimento sin ayuda de nadie hasta tanto que los soldados guarecieron de sus fla-quezas y comenzaron a sentildeorear la tierra y adquirir indios e indias de su servicio hasta ponerse en el estado en que ahora estaacute la tierra He querido escribir y traer a la memoria de V A para hacerle saber la ingratitud que conmigo se ha usado en esta tierra porque al presente se repartioacute por la mayor parte de los que hay en ella asiacute de los anti-guos como de los modernos sin que de miacute y de mis trabajos se tuviese ninguna memoria y me dejaron de fuera sin me dar indio ni ninguacuten geacutenero de servicio Mucho me quisiera hallar libre para me ir a presen-tar delante de VA con los servicios que a SM he hecho y los agravios que ahora se me hacen mas no estaacute en mi mano porque estoy casada con un caballero de Sevilla que se llama Pedro de Esquivel que por servir a SM ha sido causa que mis trabajos quedasen tan olvidados y se me renovasen de nuevo porque tres veces le saqueacute el cuchillo de la garganta como allaacute VA sabraacute A que suplico mande me sea dado mi repartimiento perpetuo y en gratificacioacuten de mis servicios [en el origi-nal del AHN Diversos doc 141 dice ademaacutes mande que sea proveydo mi marido de alguacuten cargo conforme a la calidad de su persona pues el de su parte por sus servicios lo merece] lo merece Nuestro sentildeor acre-ciente su Real vida y estado por muy largos antildeos De esta ciudad de la Asuncioacuten y de julio 2 1556 antildeosServidora de V A que sus Reales manos besa

Dontildea Isabel Guevara

144 Sacar agua de un riacuteo acequia o presa

166 JUAN FRANCISCO MAURA

Sobremdash A la muy alta y muy poderosa sentildeora Princesa dontildea Joana Gobernadora de los reinos de Espantildea etc ndash En su Consejo de Indias (Isabel de Guevara 619-21)

Iroacutenicamente la carta teniacutea que llegar a manos de la desdichada heredera del trono de Castilla e hija de los Reyes Catoacutelicos Juana laquola Locaraquo que habiacutea muerto el antildeo an-terior Son profeacuteticas las palabras de esta mujer no soacutelo porque sus hechos personales quedasen en el olvido sino porque incluso se ha borrado la historia de las mujeres en el Nuevo Mundo negando su presencia Por lo menos Isabel Guevara tuvo acceso a una pluma iquestCuaacutentas seriacutean las que ni siquiera sabriacutean escribir

Otra contemporaacutenea fue dontildea Leonor de Iciz que vivioacute durante la segunda mitad del siglo XVI Interesa sobre todo por los sonetos que escribioacute en elogio de Ercilla soldado que participoacute en la conquista de Chile y que se inmortalizoacute con su obra La Araucana (Serrano y Sanz 269 534) Lo mismo hizo Dontildea Bernarda Lintildeaacuten en 1610 autora de otro soneto en memoria del capitaacuten Gaspar Peacuterez de Villagraacute que participoacute en la conquista de Nuevo Meacutexico (Serrano y Sanz 270 14) Los escritos de estas mujeres tratan de de dos de las eacutepicas maacutes dramaacuteticas de la conquista

En el Peruacute y en pleno siglo XVII aparece otra fundadora de conventos Sor Bernardina de Jesuacutes que ademaacutes fue comparada con Santa Teresa por la semejanza de sus laquocartasraquo con las de la santa de Avila Fue fundadora del convento de Tacunga en Quito maacutes tarde destruiacutedo por un terremoto Dice Serrano y Sanz con respecto a su biografiacutea un tanto legendaria que fue carmelita descalza de Lima y hermana de Dontildea Mariacutea Benavides y Esquivel abuela de D Pedro de Peralta Barnuevo (Serrano y Sanz 269 553) Dicen que esta santa se alimentoacute durante treinta antildeos con laquochochos y caacutescaras de naranja hecho tan raro como increiacuteble Cuando fallecioacute reparaban las monjas en ponerle una vara de azucenas porque habiacutea sido casada y aquellas flores aparecieron milagrosamente sobre el cadaacuteverraquo (Serrano y Sanz 269 553)

Otra limentildea del primer cuarto del siglo XVII con reputacioacuten de santa fue Dontildea Luisa Melgarejo En este caso no se trata de una religiosa de oficio sino de la mujer del doctor Juan de Soto La uacutenica diferencia es que dontildea Luisa al parecer teniacutea laquovisiones y reve-lacionesraquo lo que debioacute poner nervioso a maacutes de un miembro del tribunal del laquoSanto Oficioraquo que consideraron sus escritos laquoculpadosraquo De su papel de laquosantaraquo pasa por lo tanto al de laquoposesaraquo o laquoendemoniadaraquo El inquisidor de Lima Gaitaacuten escribioacute un infor-me donde a traveacutes de la opinioacuten puacuteblica y de otras averiguaciones se deciacutea que dontildea Luisa Melgarejo laquomujer santaraquo sabiacutea cuando las almas de los difuntos saliacutean del Purga-torio El diacutea 14 de noviembre de 1623 se decidioacute tomar posesioacuten de todos los cuadernos en los que habiacutea escrito las experiencias de todos sus laquoarrobos suspensiones extasis y revelacionesraquo Estos cuadernos una vez recogidos presentaron toda una serie de al-teraciones borrones adiciones enmiendas incluso diferente letra por lo que despueacutes de haber sido examinados resultaron culpables145 Excelente imaginacioacuten debioacute tener dontildea Luisa Melgarejo la suficiente al parecer para convencer a algunos miembros de la iglesia de que en sus escritos laquohabiacutea algoraquo que mereciacutea la pena Estas cosas ocurriacutean en Lima uno de los centros culturales maacutes importantes de la vida social y poliacutetica en la Ameacuterica espantildeola Lima a comienzos del siglo XVII seguacuten el empadronamiento llevado

145 Serrano y Sanz 270 47 Veacutease J T Medina Historia del tribunal del Santo Oficio de la Inquisicioacuten de Lima (1569-1820) (Santiago Imprenta Gutemberg 1887) Tomo II 34-41

167ESPANtildeOLAS DE ULTRAMAR EN LA HISTORIA Y EN LA LITERATURA

a cabo en 1614 por el marqueacutes de Montesclaros era una ciudad de 25000 habitantes de los que 11000 eran espantildeoles El nuacutemero de religiosos y religiosas llegaba a 1720 (Pittaluga 77)

Se sabe que en la Isla de Santo Domingo durante el siglo XVI nacioacute o al menos resi-dioacute una poeta de ceacutelebre apellido en los aconteceres del Nuevo Mundo Dontildea Elvira de Mendoza de la que se conserva un manuscrito en la Real Academia de la Historia laquoCantares miacuteos que estaacuteis rebeladosraquo Eugenio de Salazar hace un elogio de ella como poeta en un Soneto a la ilustre Poeta y Sentildeora Dontildea Elvira de Mendoza moradora en la ciudad de Santo Domingo (Serrano y Sanz 270 53)

Nacida en Burgos sobre el antildeo 1590 dontildea Luisa de Padilla merece un lugar aparte dentro del grupo de mujeres escritoras de su eacutepoca Por su estilo faacutecil y castizo su no-vedad de pensamientos y su rica erudicioacuten recibioacute el siguiente comentario de Manuel Serrano y Sanz laquoPocas figuras hay en nuestra historia literaria femenil que puedan compararse a esta eminente prosista acaso la maacutes notable de cuantas florecieron en Es-pantildea durante el siglo XVIIraquo (Serrano y Sanz 270 95-96) Este comentario y comparacioacuten deberiacutea ampliarse para que tambieacuten incluyese a laquola historia literaria varonilraquo

Dontildea Luisa fue defensora de la labor que la Inquisicioacuten estaba realizando en la laquolim-piezaraquo de mujeres laquosoldados del demonioraquo que existieron en algunas provincias espa-ntildeolas en aquel tiempo Muchas de las mujeres que combinaban la magia con los po-deres curativos fueron condenadas no solamente por hombres de la Inquisicioacuten sino tambieacuten por mujeres de todas las clases sociales como es el caso de Luisa de Padilla condesa de Aranda En su obra Elogios de la verdad e invectiva contra la mentira preveniacutea contra aquellos que practicaban artes en contra de la religioacuten cristiana La magiacutea negra seguacuten Padilla era la causante de que muriesen casi tantas personas como otras causas naturales habieacutendose descubierto hasta seis mil brujas en Vizcaya y Guipuzcua con-fesando una mujer de un pueblo pequentildeo haber matado con su laquomagiaraquo a ochocientas personas (Perry 31) Eran estos laquomales de ojoraquo y maldiciones seguacuten la autora las causas de que se secasen los pechos de las madres lactantes que se separasen las parejas casa-das y que abortasen las embarazadas (Perry 31)

Si se tiene en cuenta que dontildea Luisa estuvo emparentada con la maacutes rancia aristocra-cia de su tiempo o lo que es lo mismo con algunos de aquellos que en cierta manera dirigiacutean los destinos de Espantildea en aquella eacutepoca (Duques de Lerma Duque de Uceda Marqueacutes de Cueacutellar Conde de Santa Gadea Marqueacutes de Belmonte por citar algunos) se comprenderaacute mejor su identificacioacuten con una institucioacuten que en teoriacutea velaba por la salvaguarda de los valores laquoeternosraquo de una Espantildea destinada a ser la campeona del ca-tolicismo durante los siglos XVI y XVII El padre de dontildea Luisa fue don Martiacuten de Padilla y Manrique extraordinario militar que proboacute su valor contra enemigos moriscos ingle-ses holandeses piratas berberiscos y el renegado genoveacutes Muley Faxad Fue veterano de la batalla de Lepanto donde apresoacute a cuatro galeras y acompantildeoacute con su escuadra a la reina Dontildea Margarita de Austria cuando vino de Geacutenova en 1598 laquoHabiacutea obtenido a 24 de julio de 1587 el tiacutetulo de Conde de Santa Gadea y en 1596 el de Capitaacuten General de la Armada del mar Oceacuteanoraquo (Serrano y Sanz 27095-96)

Por otra parte tambieacuten se sabe que dontildea Luisa participoacute directamente y desde tem-prana edad en la praacutectica de algunas actividades intelectuales como la historia y la arqueologiacutea a la vez que dedicaba su tiempo a virtudes cristianas como la caridad y el socorro de los necesitados (Serrano y Sanz 270 97) Resulta mucho maacutes faacutecil compren-

168 JUAN FRANCISCO MAURA

der la postura ideoloacutegica de esta gran mujer si tienen en cuenta ademaacutes de los factores antes mencionados otros tantos de caraacutecter biograacutefico concernientes a su educacioacuten y matrimonio

Otra escritora fue la mexicana dontildea Mariacutea Casilda Pozo natural de Temestla (Meacutexi-co) Nacida en el mes de abril de 1682 dejoacute escrita su biografiacutea en 16 cuadernos el ma-nuscrito original se encuentra en la biblioteca del colegio de San Gregorio de Meacutexico Fue su confesor el jesuiacuteta Domingo Quiroga que fue quieacuten la incitoacute a escribir su obra (Serrano y Sanz 270 137) Sor Juana de San Antonio aparece a principios del siglo XVII formando parte de un grupo de religiosas espantildeolas que fueron a Manila por la ruta de Meacutexico Ademaacutes de distinguirse por sus cualidades personales su obra interesa por ofrecer informacioacuten testimonial y costumbrista acerca de la forma de vestir de chinos y japoneses (Serrano y Sanz 270 225)

Otra monja esta vez ecuatoriana fue Gertrudis de San Ildefonso Nacida en 1652 profesoacute su vocacioacuten en el convento de Santa Cruz de Quito dejando escrita su vida por mandato de su confesor el padre Martiacuten de la Cruz el cual hizo una biografiacutea laquoen tres gruesos voluacutemenesraquo Gertrudis de San Ildefonso murioacute en 1709 (Serrano y Sanz 270 300) en olor de santidad

Sor Mariacutea Ana Agueda de San Ignacio nacioacute el 3 de marzo de 1695 en la dioacutecesis de la puebla de los Angeles en un rancho del lugar de Santiago Tecaliacute (Serrano y Sanz 270300) Esta monja mexicana escribioacute varias obras durante su vida conventual a lo largo de la cual desempentildeoacute el cargo de priora por muchos antildeos Entre sus obras todas de caraacutecter piacuteo y de laquoamor divinoraquo escribioacute un curioso y laquocopiosoraquo tratado de la Leche virginal de la Soberana Madre de Dios El padre Fr Juan de Villa Saacutenchez hace el siguiente comentario al respecto laquoen que hablando primero en sentido natural de los beneficios que debemos a Nuestra Sentildeora pasa a tratar en sentido miacutestico y alegoacuterico enten-diendo en la leche la doctrinaraquo (Serrano y Sanz 270301) Mexicana fue tambieacuten Sor Petronila de San Joseacute que ejercioacute como abadesa del Real monasterio de Jesuacutes Mariacutea de la ciudad de Meacutexico Escribioacute Vidas de varias religiosas ejemplares obra que tiene su im-portancia ya que al parecer laquoDe esta obra se sirvioacute D Carlos de Siguumlenza y Goacutengora para escribir su Parayso Occidental (Meacutexico 1684) seguacuten eacutel mismo declara en el proacutelogo diciendo lsquoa quien si hay algo bueno en esta historia se le debe todorsquoraquo (Serrano y Sanz 270 354) Menos conocida fue su compatriota Sor Luisa de Santa Catalina natural de Xacona laquopueblo situado en las inmediaciones de Zamora (Meacutexico)raquo siendo bautizada en 1682 Escribioacute Cartas espirituales a su confesor el P Juan Loacutepez de Aguado (Serrano y Sanz 270 361-62)146

Todos estos escritos la mayoriacutea de ellos ignorados por el gran puacuteblico tienen la im-portancia de darnos una perspectiva diferente En otras palabras ensentildearnos la maacutes refinada sensibilidad de muchas mujeres que permanecieron y en su mayoriacutea siguen permaneciendo a laquooscurasraquo de una eacutepoca tan rica de la literatura espantildeola como fue el Siglo de Oro Este siglo fue tambieacuten en su dimensioacuten literaria y artiacutestica patrimonio de la mujer

146 Para profundizar en muchas de estas escritoras hispano-americanas la consulta de la Biblioteca Hispano-Americana de Beristain de Souza resulta de capital importancia

169ESPANtildeOLAS DE ULTRAMAR EN LA HISTORIA Y EN LA LITERATURA

Sor Nada ardores divinos de una monja adolescente escritos ineacutedi-tos de una recieacuten profesa del siglo XVI147

iexclQueacute encantadores son tus amores hermana miacutea espo-sa iexclQueacute deliciosos son tus amores maacutes que el vino Y el aroma de tus perfumes es mejor que el de los baacutelsamos Miel virgen destilan tus labios esposa miel y leche hay en tu lengua y el perfume de tus vestidos es como aroma de incienso (Cantar de los Cantares 4 10-11)

Sor Nada llamada asiacute por humildad seguacuten dice el Indice de manuscritos de la Biblio-teca Nacional de Madrid es uno de los ejemplos maacutes desconocidos e interesantes que tenemos de la poesiacutea y prosa amoroso-religiosa del siglo XVII Hasta la fecha nunca se habiacutea publicado su obra e incluso hasta el antildeo 1995 para mi sorpresa no habiacutea copias microfilmadas de sus manuscritos en la Biblioteca Nacional Serrano y Sanz en su libro Apuntes para una Biblioteca de Escritoras Espantildeolas hace una escueta y pasajera mencioacuten de esta mujer y de su obra (68-69) siendo eso todo lo que hasta ahora se sabiacutea de ella Sus escritos consisten en los siguientes manuscritos

1 laquoEn queacute consiste un verdadero amor de Diosraquo 9 hojas uacutetiles en 4ordm letra del siglo XVII Biblioteca Nacional de Espantildea Manuscrito 1295926

2 laquoPintura del Propio Amorraquo laquoPintura del propio Amorraquo 10 hojas uacutetiles en 4ordm letra del siglo XVII Biblioteca Nacional de Espantildea Manuscrito 1295927

3 laquoEsplicacioacuten sobre en queacute consiste la paz del Almaraquo laquoQuartillas aacute un Alma que padece soledad interiorraquo 7 hojas uacutetiles en 4ordm letra del siglo XVII Biblioteca Nacio-nal de Espantildea Manuscrito 1295828

En cuanto a su persona soacutelo se nos dice que laquose encubrioacute con este seudoacutenimo laquoSor Nadaraquo Esta monja desconocida de origen hispanoamericano posee toda la frescura e ingenuidad de una joven apasionada metida por vocacioacuten u obligacioacuten a ejercer la profesioacuten maacutes comuacuten para mujeres de cierta clase social de su tiempo En sus liacuteneas podemos encontrar un misticismo simple incluso en algunos momentos infantil pero a su vez lleno de una fuerza y sensualidad interior poco comuacuten en escritos de este geacute-nero que desborda los liacutemites del laquoamor divinoraquo a traveacutes de los diaacutelogos entre el Alma y el Esposo Sor Nada consigue proyectar su amor a Dios maacutes allaacute de una experiencia romaacutentica Su experiencia es sincera y genuinamente miacutestica trascendiendo la imita-cioacuten o la propia creacioacuten poeacutetica ficcionalizada (Hatzfeld 30) Algunos pasajes son de un

147 Veacutease mi artiacuteculo Sor Nada ardores divinos de una monja adolescente escritos ineacuteditos de una monja profesa del siglo XVIIraquo Espeacuteculo Revista de estudios literarios 26 (2004) 1-10 Universidad Complutense de Madrid http wwwucmesinfoespeculonumero26sornadahtml

170 JUAN FRANCISCO MAURA

alto contenido eroacutetico con sustantivos y metaacuteforas que recuerdan la maacutes iacutentima unioacuten amorosa en unos casos y el tierno amor maternal en otros

[T]e miro Jesus mio desnudo a las inclemencias del tiempo y ardien-do en puro fuego de Amor por la salud de las Almas y me ensentildeas a que te ame con todo mi corason y puresa de espiritu No atendiendo ni buscando umanos intereses ni a solisitar consuelos ni regalos espi-rituales que suelen empantildear la puresa del noble corason No mi Jesus amable pues antes me ensentildeaste tu puro Amor que desnudo sean [sic] de encaminar mis passos desde el pesebre asta la cuna en donde te miro tan desnudo como el pesebre y todo Sentildeor por mi Amor (Mss 12959 26 hoja 1 v)

El manuscrito (12959 27) de la mencionada serie de tres contiene algunas correccio-nes quizaacute hechas por el confesor o quizaacute por ella misma cuando se dirige con excesiva familiaridad y arrebatado fervor a su Amado148 He escogido el manuscrito (12959 Caja 28) en primer lugar por ser el ejemplo maacutes representativo de su poesiacutea y prosa En este manuscrito encontramos de forma maacutes directa que alegoacuterica toda la frescura de un diaacutelogo entre Jesuacutes y el alma que raya como diriacutea Cervantes laquoa la llana y sin rodeosraquo (667 lib 2 cap 38) con el doloroso y a veces desesperado deseo de la entrega y la unioacuten final con el Amado La ortografiacutea no ha sido corregida respetaacutendose el texto ori-ginal149 Veamos el siguiente fragmento

Mira que te amo con Amor de padre y con Amor de esposo el mas fino y puro enamorado que no tan solo me presio de darte mi mano sino tambien todo mi cuerpo y sangre para que con mi pan de vida te sustentes y te regales a tus anchuras y que con mi propio espiritu vivas en paz como tu lo deseas y que mis amores sean unico alivio en tus trabajos en esta mortal vida pues si esto es asi y sabes que muero por darte vida dime esposa mia de que te fatigas Dame querida tus bras-sos y dime si me amas como yo te amo (Hoja 4)

148 La antologiacutea de Promis ha procurado insertar entre los textos antoloacutegicos algunos que se refieren a la es-critura de mujeres fundamentalmente de aquellos generados en el interior de los espacios conventuales Estos textos se fundan como laquohistorias de vidasraquo y responden casi siempre a los requerimientos de los confesores de las monjas coloniales En este sentido resulta valiosiacutesima la incorporacioacuten de la llamada Relacioacuten autobiograacute-fica de Sor Ursula Suaacuterez como una muestra significativa de la escritura monjil entendida en esta eacutepoca (como tambieacuten en la tradicioacuten europea medieval) inserta en las denominadas laquolabores de manoraquo de las religiosas ya que el texto escrito por mandato se convertiacutea en una suerte de entramado o tejido linguumliacutestico es decir en un nuevo bordado que la mayor parte de las veces el confesor convertido en censor iba haciendo tachando y enmendando En la antologiacutea Promis agrega un texto de Sor Tadea Garciacutea de la Huerta titulado Relacioacuten de la inundacioacuten que hizo el riacuteo Mapocho de la ciudad de Santiago de Chile en el monasterio de Carmelitas titular de San Rafael el diacutea 16 de junio de 1783 se trata de un poema tipo romance escrito en versos octosilaacutebicos y que da cuenta de lo sucedido ese diacutea en el convento (Resentildea de la literatura del reino de Chile de Joseacute Promis Eddie Morales Pintildea httpwwwupaclpublicaciones2002literatura_promishtm)

149 Son frecuentes las faltas ortograacuteficas Una de ellas es el uso constante del seseo La ausencia de acentua-cioacuten y puntuacioacuten exceptuando alguacuten punto o coma arbitrario no seguido casi nunca de mayuacutescula inicial lo mismo que el uso igualmente aribitrario de la h o de b v r q g j m n x etc No olvidemos de la misma forma la laxitud linguumliacutestica existente en el siglo XVII (no sabemos a queacute parte de eacuteste pertenece el manuscrito) asiacute como la joven edad de la monja

171ESPANtildeOLAS DE ULTRAMAR EN LA HISTORIA Y EN LA LITERATURA

Los versos del presente manuscrito poseen la misma fuerza que tiene su prosa Con una estructura estroacutefica indefinida estaacuten aparentemente corregidos por alguien que tu-vo la oportunidad de conocer personalmente a la autora Muy probablemente se trate del padre al que hace referencia al principio del primer manuscrito laquoMandame el Pd que le declare en que consiste un verdadero amor a Diosraquo a continuacioacuten continuacutea con su caracteriacutestica humildad laquo[O]bedesere y dire lo q Dios me inspire segun mi rudesa y simplisidadraquo (Mss 12959 26) En cuanto a la fuerza pasional de esta joven observamos con cierta tristeza coacutemo aparece sublimada en sus escritos con toda la enegiacutea de una joven mujer llena de intensidad y vida pero encerrada en los liacutemites de un convento Veamos un ejemplo en donde responde el Alma en los siguientes versos

O mi enamorado Jesus O mi dulse y tierno amanteO alegria de los sielos O dulse Jesus amable

(Toda Sentildeor me derrito toda Sentildeor me desagoy quiero vivir por ti ea sentildeor abrasadme) [Tachado en el original]

Toda Sentildeor me derrito toda Sentildeor me desagoy quiero morir por vos ea Sentildeor que ya acabo

Ya tus amores me llaman ya tus perfumes me traencon suspiros y agonias Sentildeor hasta que te alcanse

O mi Jesus amoroso no puedo mas dilatarmeya la pasiensia me falta dulse Jesus abrasadme

(No puedo vivir sin vos no puedo mas dilatarmeya la pasiensia me falta dulse) [Tachado en el original]

No puedo vivir sin vos mi dulse Jesus amablepues me teneis echisada siendo mi esposo y mi Padre

Ay que me abraso Ay que me quemo del Amor deJesus nasareno como no tocan y tantildeen a fuego150

Estos versos llenos de arrebato sublimado conectan con toda la tradicioacuten miacutestica es-pantildeola que se remonta a Ramoacuten Llul y que culmina en el maacutes universal de nuestros

150 En toda la fuerza y simbologiacutea del amor maacutes iacutentimo del maacutes alto y sublime placer de la unioacuten de los amantes tal como lo encontramos en el Cantar de los Cantares y en San Juan de la Cruz Leemos en la Biblia

Ya me he quitado la tuacutenica iquestCoacutemo volver a vestirme Ya me he lavado los pies iquestCoacutemo volver a ensuciarlosMi amado metioacute su mano por el agujero (de la llave) y mis entrantildeas se estremecieron por eacutel Me levanteacute para abrir a mi amado Mis manos destilaron mirra y mis dedos mirra exquisita en el pestillo de la cerradura (5 3-5)

Nos ocurre lo mismo con San Juan de la Cruz en su insuperable poema laquoLlama de amor vivaraquo

iexclOh cauterio suaveiexclOh regalada llagaiexclOh mano blanda iexclOh toque delicadoque a vida eterna sabey toda deuda pagaMatando muerte en vida la has trocado

172 JUAN FRANCISCO MAURA

miacutesticos San Juan de la Cruz Esta tradicioacuten se extiende hasta finales del siglo XVII esto es hasta los finales del Barroco siendo un poco maacutes tardiacuteo en la Ameacuterica espantildeola Sin tener como propoacutesito discutir en el presente trabajo a queacute corriente miacutestica pertenece la obra de Sor Nada es necesario resaltar no obstante el hecho de que estaacute escrito por una mujer y ademaacutes de tierna edad El manuscrito 12959 Caja 26 termina con estas pa-labras laquo[T]odas estas boverias escrivi por entretenimiento siendo resien profesa en la religion Sor Nadaraquo Mas no por la juventud de su autora los escritos dejan de tener lo-gradas metaacuteforas imaacutegenes y siacutembolos sacados de la naturaleza La alegoriacutea de la unioacuten matrimonial poseeacute el fuego liacuterico de la maacutes apasionada de las relaciones amorosas vivi-ficada por perfumes flores insectos animales escarchas nieves o abrojos Por lo tanto aunque la narracioacuten destile cierta ingenuidad no carece por ello de un vocabulario rico con el sabor popular de la poesiacutea de los cancioneros y romances de tradicioacuten renacen-tista No ha sido otra mi intencioacuten que la de rescatar del olvido unos escritos en prosa y en verso llenos de frescura y espontaneidad que nos muestran la pasioacuten con que la joven novicia se laquoentrega en cuerpo y almaraquo a los menesteres de su profesioacuten guiada por un padre espiritual en esos primeros antildeos de formacioacuten Esta ha sido la razoacuten por la que presento a continuacioacuten el citado manuscrito en su totalidad

Sor Nada (Mss 1295928)

laquoEsplicacion sobre en que consiste la paz del AlmaraquolaquoQuartillas a un Alma que padece soledad interiorraquo

[7 hojas utiles en 4ordm letra del siglo XVII]

+

Esplicacion sobre en que consiste la paz del Alma

Pareseme segun mi rudo entender que la verdadera paz del Alma con-siste en una muy pura y buena consiencia en un corason liso y bien intensionado en una verdadera rectitud de espiritu en el qual el Alma procura bolar a Dios sin jamas detenerse a respetos umanos ni reparar en que me diran ni de que me censuraran sino me apresuro a seguir a unos entenderes y pareseres dorados en los quales pretende el mundo engantildear y ensuciar si se puede la puresa de un corason unicamente de Dios y de su Santa ley y se lo conserva cristalino con la divina asis-tencia de la gracia y comprendido de su Amor y temor siguiendo la luz divina de tan amante Sentildeor Dios y ombre verdadero con que este ilustrado corason ni se altera ni se mueve por los disfrasses dorados que ase el mundo y sus moradores mayormente con falssas amistades aunque con ellos muestre buena intension Con la misma grasia y luz de Dios conose el buen corason estos disfrasses que le ase el mundo y se retira de todo con espiritu y valor esto sin la menor alterasion sino que en suma paz se retira a buscar a Dios dentro de su mismo corason

173ESPANtildeOLAS DE ULTRAMAR EN LA HISTORIA Y EN LA LITERATURA

y se abrasa con su pura verdad en la qual se le descubren mil interio-res secretos tan solidos puros y verdaderos que la misma Alma queda abismada y de puro grandes no los puede bien comprender ni esplicar pero estos mismos secretos divinos le sirven de espuelas para no solo correr sino bolar con pies de plumas en seguimiento de su bien ama-do Jesus y como este soberano Sentildeor es tan amante de sus espossas las Almas luego que la ve bolar con pies de plumas la sale al encuen-tro en despoblado campo que se deve de llamar Campo de Amor de Dios y el mismo Sentildeor se viene a las manos por ser Dios que nos ama con Amor infinito de Padre benigno y amoroso con que asiendose en contra deso este divino enamorado en lo interyor de el Alma que le busca con ansias de servirle y amarle y en aquella soledad traban una conversasion amorosa y sensilla como la pluma simple de quien esto escrive

Divino enquentroDios y el Alma en la soledad

O Soberano Principe de la paz dise el Alma tus perfumes me traen a ti bolando porque alla en el mundo y sus valedores me pretendian engantildear y entretenerme con pegaminossas amistades que facilmen-te me pudieran envenenar y matarme apartandome de ti Mi dulse Jesus amable mi Redentor Soberano que con tantas ansias me sales al enquentro como siervo [ciervo] erido de mis Amores los quales tu Amor me ofrese para que con tu mismo Amor te ame y te sirva en paz sin perturbarme ni contristarme ni cansarme de padeser pasando si se ofrese por escarchas nieves espinas ni abrojos ni por otros diverssos trabajos ni piedras de contradision que tu me puedes permitir pues por mas que el mar se levante con sus ferosses olas contra mi ni piedras se me tiren al rostro en todo Sentildeor me quieres con serenidad pasifica sin la menor perturbasion Todo Sentildeor quieres que lo tome con Serenidad de espiritu y asi vengo a ti bolando para que mejor me ensentildees a vivir segun las leyes de tu noble condision que me son muy agradables por mas que el mundo me las despresie por segir sus vanidades y torsidas intensiones con apariensias de bien y con este engantildeo y bien me quie-ro mas a mi que no a mi proximo veo que segun mi pareser se pierden muchas Almas y tambien de aquellos que se depresian y pasan por muy espirituales Con que me paresen pocos los que llegan a padeser con desnudes151 de espiritu por tu purisimo Amor y me parese essas se quedan muy atrasadas en la virtud por el peligro de bolver muy atras el paso de modo que se pueden despentildear y pereser en su misma desgra-sia ya por soberbia o por otras enfermedades que se les pega al corason y asi lo pasan como siegos ignorantes sin advertir en sus peligros

151 La letra en cursiva es miacutea

174 JUAN FRANCISCO MAURA

este aquerdo Sentildeor y otros que tu verdad me ensentildea me ase venir uyendo de las paredes del mundo y me vengo a ti Dios mio bolando con las dos Alas del Amor y temor que tu mismo Amor me ofrese tan de gracia y tan de grado que no se duentildeo mio con que lo responder a tan soberano beneficio y finesa de tus entrantildeas de Amorvengo Sentildeor y esposo mio unicamente a descansar en ti pues los peli-gros del camino me an puesto en mucho sobresalto temiendo el per-derte y sin ti perderme para siempre por una eternidad sin fin pues deseo amado mio ganarme ganandote a ti y vivir en ti aora en vida y despues eternamente y estos cuidados me traen fatigada molida y cansada y no podre tener alivio y descanso sino viendome entre tus brassos aunque sea estando en cruz pues ese es el fin de mis deseos vivir y morir en ti ablame mi cordero manso y ensentildeame a que ver-daderamente te ame como fiel esposa ea mi caro amigo dame la ma-no pues sabes Amor mio que en mi no ay mano sin tu misma mano y asi mi Dios y Sentildeor mi Principe Soberano con umilde rendimiento y deseos de alcansarte te suplico me des la mano y me consueles en estos mis trabajos Deseo Sentildeor vivir en paz y los malos amores de mi Naturaleza flaca no me dejan detentar y no quieren por mi desgrasia atropellar con las leyes de tu Amor ni quisiera perturbar mi corason quando me veo con un torvellino de olas y contratiempos que a menu-do me suelen sercar pero si tu Sentildeor me das la mano nada temo sino que me aseguro y vivire en paz sin que me fatiguen los contratiempos pues mi mano en la tuya y mi espiritu en el tuyo por mas borrascas que me envistan no seran bastantes para rendir mi voluntad a la suya bien si para pronunsiar un fiat que resuene bien atras en tus oidos y que en medio de mis fatigas me ponga a cantar tus divinas misericor-dias hea Sentildeor ya pretendo serrar mis labios por no desir mas bove-rias y deseo Sentildeor oir tus palabras de vida eterna abla Sentildeor que tu sierva oye con atension y cuydado mira mi Dios que se me ase tarde y espero con prisa deseando saborearme y aprovecharme de los ecos de tu Santa dotrina pues todas tus palabras saben a eterna vida callen pues mis sentidos y potensias y todo se ponga en paz pues mi dulse y soberano Sentildeor no se escusara de ablar me aun que en mudo silensio hea mi gran Prinsipe de la paz ablame que tus puros amores me traen perdida por estos asperos montes y mis cortos pasos no te pueden dar alcanse mirame mi Dios a tus pies postrada como un vil gusano y me-nor ormiga de la tierraabla Jesus y dise a su esposa el Alma querida esposa mia que me pides y por que te muestras tan fatigada y mal sufrida no vives como corde-rita del campo buscando de mis pechos el sustancial pasto mi Amor no te sustenta y mi grasia te promete eterna vida pues dime amada de que te fatigas y te muestras mal sufrida mira que te amo con Amor de padre y con Amor de esposo el mas fino y puro enamorado que no tan solo me presio de darte mi mano sino tambien todo mi cuerpo y

175ESPANtildeOLAS DE ULTRAMAR EN LA HISTORIA Y EN LA LITERATURA

sangre para que con mi pan de vida te sustentes y te regales a tus an-churas y que con mi propio espiritu vivas en paz como tu lo deseas y que mis amores sean unico alivio en tus trabajos en esta mortal vida pues si esto es asi y sabes que muero por darte vida dime esposa mia de que te fatigas Dame querida tus brassos y dime si me amas como yo te amoResponde el Alma152 Tu mi Dios sabes si yo te amo pues de mi solo se que mis deseos y ansias buelan a ti mas no alcanso a saber si te amo como tu de-seas ser amado y como desconfio tanto de mi y de mis prosederes falssos temo Dios mio perderme y perderte y asi Sentildeor pues no desechas mis Amores y te muestras tan fino en amarme te pido me ensentildees a vivir segun las leyes de tu pura verdad y fina condisionhija mia dise Dios la prueva de un verdadero Amor consiste en sufrir callar y padeser por mi unico Amor y en todo seguir mis pasos sin ja-mas retroseder por mas fragoso que se muestre el camino pues nunca seran tantas las espinas las escarchas ni las nieves ni los vientos bo-rrascosos que te se ofrescan pasar por mi Amor como los que mi tierno y desinteresado Amor paso por ti y siempre con mis pies descalssos y asi hija y esposa mia muestrate costante en seguir lo perfecto de mis passos pues mi braso fuerte sera en ti y peleara por ti y te sera el todo en tus nesesidades y mi Amor te convertira en dulse y suave lo amargo y molesto a la condision de la carrne

Responde el Alma

O mi enamorado Jesus O mi dulse y tierno amanteO alegria de los sielos O dulse Jesus amable

(Toda Sentildeor me derrito toda Sentildeor me desagoy quiero vivir por ti ea sentildeor abrasadme) [Tachado en el original]

Toda Sentildeor me derrito toda Sentildeor me desagoy quiero morir por vos ea Sentildeor que ya acabo

Ya tus amores me llaman ya tus perfumes me traencon suspiros y agonias Sentildeor asta que te alcanse

O mi Jesus amoroso no puedo mas dilatarmeya la pasiensia me falta dulse Jesus abrasadme

(No puedo vivir sin vos no puedo mas dilatarmeya la pasiensia me falta dulse) [Tachado en el original]

No puedo vivir sin vos mi dulse Jesus amablepues me teneis echisada siendo mi esposo y mi Padre

152 La aparicioacuten de una mayuacutescula al principio de una oracioacuten es algo totalmente arbitrario en este ma-nuscrito dada la libertad ortograacutefica de la autora Como se puede observar en la mayor parte de las veces no es el caso

176 JUAN FRANCISCO MAURA

Ay que me abraso Ay que me quemo del Amor deJesus nasareno como no tocan y tantildeen a fuego

Responde Jesus Hija mia tus simples vozes oygo y aunque resuenan bien a mis oidos pero te deseo mas mansa y pasifica en tus fervores ya sabes que no siempre as de vivir en mantillas ni a los pechos de tu Madre por que es rason que padescas con espiritu fuerte como mu-jer valerosa por que a una esposa del Rey soberano y prinsipe de la paz no le estan bien chiquerias ni fervores de nintildea malcriada y ya es ora que la destete su Madre la Naturaleza y que empesando su nueva vida camine con el favor de mi grasia sigiendo mis passos de eterna vida esto con sus pies descalssos segun mis leyes de Amor puro y desinteresado lo tienen ordenado153 y vivir en paz como lo deje en-cargado a mis apostoles Santos repitiendoles varias vezes Vivir en pas y caridad esto es un vivir en Dios y Dios en el Alma y asi hija mia el Alma que vive en paz vive en mi Como mis cortesanos en el cielo y pues me pides que te ensentildee a vivir segun las leyes de mi condision Repito el desir que te debes mostrar sufrida en todo tiempo y estado sin permitir en tu corason que ni aun los fervores se adelanten con estremos ni ademanes sino atiende y aprende de mi purisima Madre pues siempre la veras si bien lo consideras que mientras vivio en el mundo en todos sus trabajos se mostro firme fuerte costante como piedra diamante Pues mirandome nintildeo entre sus brasos desnudo en el pesebre desnudo y crusificado en los brassos de una cruz En estos y otros passos no se mudo su rostro sino que en suma serenidad y pasifico corason toda se sacrificaba enteramente en los brassos de mi Amor y rendido su corason y voluntad en la de mi eterno Padre por ejemplo te la doy y deseo que aprendas de sus nobles calidades pues te aseguro carisima que las leyes de mi condision y pura verdad todo lo allaras enserrado en el corason de mi purisima Madre sedle fiel y descansaras en paz

+

Quartillas a un alma que padese soledad interior

1Un Alma afligida y tristese ve en un campo desiertay en el su esposo la tieneAtormentada y sedienta

153 Es a traveacutes de estas liacuteneas lo que hace suponer que la autora de este diaacutelogo amoroso entre el Alma y Je-suacutes es novicia esto es laquoque estaacute empesando su nueva vidaraquo En las mismas liacuteneas una vez maacutes se hace alusioacuten al laquodesteteraquo de su vida civil laquoa una esposa del Rey soberano y principe de la paz no le estan bien chiquerias ni fervores de nintildea malcriada y ya es ora que la destete su Madre la naturalesaraquo (fol 5)

177ESPANtildeOLAS DE ULTRAMAR EN LA HISTORIA Y EN LA LITERATURA

2Pendiente se ve en el AyreSolo un hilo la sustentasin tocar el pie en el sueloporque del no tome tierra

3Mirandola esta yto a ytoaquel sol que la atraviesay la enviste con sus rayosmas ella no pestantildeea

4Como sigarra padese y como a tal se atormentabatiendo sus mismas Alasy el corason se atraviesa

5Con penas sustos temoresquando se mira assi mesmasin tener valor en nadaporque es la misma flaquesa

6Pero el Amor de su esposotoda su atension le llevay la pone en un abismopero cubierto en tiniebla

7Desea dar algun bueloy subir con ligeresapero se mira travadacon una fuerte cadena

8Clama suspira y padeseMas del todo se sujetaRindiendo su voluntadA la divina clemencia

9Los enemigos del AlmaCruelmente le asen guerray ella aunque firme y constantelos reselos la atormentan

178 JUAN FRANCISCO MAURA

10de todos modos padeseaunque gosa la asistensiadel divino esposo amadoque en su interior se recrea

11Solo de verla penary con verla tan serenadise resibe mil gustosde su sigarra pequentildea

12Le sabe el mundo a mil yelesy su trato le atormentaviendo en el mil falsedadesque todas saben a tierra

13Para poderse librardeja de correr y buelacon las Alas del Amory el mismo Amor se la lleva

Una vida dedicada a un amor divino un amor que le haraacute llenar un buen nuacutemero de cuartillas dedicadas a tan alta empresa Se desconoce si la vocacioacuten de Sor Nada con-tinuoacute con tanta intensidad el resto de sus diacuteas Ciertamente la vida en el covento no era faacutecil En algunos casos la experiencia era traumaacutetica incluso fatal para algunas de las adolescentes de la Ameacuterica Espantildeola Las reglas del claustro eran severas por varias razones Estas joacutevenes si no teniacutean el permiso de la superiora no podiacutean recibir visitas no podiacutean volver a sus casas su correspondencia era censuraba y no podiacutean salir del periacutemetro conventual Igualmente se levantaban antes del amanecer para oir misa tra-bajaban el resto del diacutea y lo maacutes interesante es que muchas veces esta vida era aceptada por muchas

Page 31: Tercera parte: Mujeres en la vida intelectual - …parnaseo.uv.es/Editorial/Maura/TerceraParte.pdf · La Biblia, por su parte, hace repetidas menciones de la mujer y sobre el comporta-

161ESPANtildeOLAS DE ULTRAMAR EN LA HISTORIA Y EN LA LITERATURA

ciones se espera al menos incluirlas y poder despertar el suficiente intereacutes para que sus vidas y sus obras no sigan sumergidas en las simas del olvido Para que estas mujeres de la iglesia pudiesen satisfacer su curiosidad cognoscitiva era necesario romper todas aquellas barreras que supusiesen un estorbo o una restriccioacuten a la hora de investigar consultar o hablar con cualquier persona religiosa de cualquier orden o secular ya fue-se obispo o cleacuterigo Las posiciones intelectuales entre las diferentes oacuterdenes religiosas fueron muy dispares como bien es sabido No eran iguales los planteamientos teoloacute-gicos de los dominicos que los de los franciscanos o los de los carmelitas que los de los agustinos o jesuitas Era necesario por lo tanto tener acceso a estas fuentes de informa-cioacuten para poder constrastar las diferencias y hacer valoraciones propias (Vigil 237-38) El escritor espantildeol Caro Baroja destaca el caraacutecter enciclopeacutedico del catolicismo donde se han integrado corrientes y posturas muy dispares que a traveacutes del diaacutelogo daban cierto espacio al creyente con maacutes curiosidad intelectual para que este pudiese compa-rar y valorar las diferentes opciones que se le ofreciacutean (Vigil 237-38)

Varias de estas mujeres intelectuales fueron hijas de conquistadores que aunque na-cidas en suelo americano seguiacutean expresaacutendose en la lengua de sus padres con no me-nos fuerza que sus contemporaacuteneas peninsulares Es cierto que existieron numerosas escritoras en el Nuevo Mundo durante el siglo XVIII algunas dedicadas incluso al estudio de las matemaacuteticas como la mexicana Dontildea Francisca Gonzaga y Castillo Pero para limitar el presente trabajo a los siglos XVI y XVII uacutenicamente se incluiraacuten ejemplos de estos dos siglos

La peruana Josefa de Alarcoacuten publicoacute en 1648 unas liras dedicadas a las Exequias del Priacutencipe Baltasar Carlos

Cifro en capilla breveEl tribunal de la Magestad maacutes graveEn fe de lo que debeA Carlos que en dos mundos no cabe141

El caso de Sor Jeroacutenima de la Asuncioacuten es muy interesante una mujer que tuvo la oportunidad de viajar a Meacutexico y posteriormente a las Filipinas para cumplir con las mi-siones que le habiacutean sido encomendadas por su orden Nacida en Toledo en 1555 en el seno de una noble y acaudalada familia estuvo destinada a recorrer el mundo ofrecien-do sus servicios a todos los necesitados distinguieacutendose por su ardiente caridad laquovien-do que los galeotes eran tratados con dureza excesiva sobre todo cuando los llevaban de un pueblo a otro procuroacute aliviar las penas de aquellos desgraciados y lo consiguioacute en parteraquo (Serrano y Sanz 268 65) Hija del licenciado e ilustre jurista Pedro Garciacutea Yaacute-ntildeez y de dontildea Catalina de la Fuente ingresoacute contra su voluntad en el monasterio de las Clarisas de Santa Isabel de los Reyes (Toledo) el 5 de agosto de 1570 (Trevintildeo 46) hay que decir que eacutesta no seraacute la uacutenica voluntad contra la que tuvo que luchar

Sor Jeroacutenima se embarcoacute para Meacutexico y de alliacute partioacute hacia Manila junto con siete compantildeeras en el famoso laquoGaleoacuten de Manilaraquo que saliacutea anualmente del puerto mexi-cano de Acapulco Su viaje a las Filipinas duroacute un antildeo y tres meses desde su salida de Espantildea tiempo en el que demostroacute un gran valor y determinacioacuten por el soacutelo hecho de

141 Manuel Serrano y Sanz Apuntes para una biblioteca de escritoras espantildeolas desde el antildeo 1401 al 1833 vols 268 269 270 271 Biblioteca de Autores Espantildeoles (Madrid Atlas 1975) 268 19

162 JUAN FRANCISCO MAURA

embarcarse en tan precarias naves Fue la primera misionera de Oceaniacutea muriendo en Manila en 1621 Alliacute fundoacute el monasterio de Santa Clara que perviviriacutea hasta ser bom-bardeado en la Segunda Guerra Mundial (Trevintildeo 47) Escribioacute su Vida donde trata de la fundacioacuten del convento y de todas las tribulaciones mdashllegoacute a ser excomulgadamdash y satisfacciones que una vida dedicada a una causa justa proporciona Tambieacuten escribioacute una obra de caraacutecter filosoacutefico-teoloacutegico titulada Carta de marear en el mar del mundo nombre alegoacuterico que da cuenta de la enorme distancia recorrida a traveacutes del laquomar del espiacuterituraquo por sor Jeroacutenima He aquiacute algunos de sus versos de caraacutecter religioso

Vuestra soy para vos naciacuteiquestQueacute mandaacuteis hacer de miacute Inaccesible grandezaEterna Sabiduriacuteay bondad del alma miacuteaDios un ser poder y Altezamirad la suma pobrezade eacutesta que se ofrece aquiacuteiquestQueacute mandaacuteis hacer de miacute (Serrano y Sanz 268 66)

Ya en Meacutexico tenemos otro ejemplo de una mujer dedicada por completo a Dios y al estudio y composicioacuten de obras de caraacutecter teoloacutegico Dontildea Ana Mariacutea del Costa-do de Cristo nacida en la ciudad de Tlaxcala hacia el antildeo 1650 Tomoacute la orden de San Francisco para consagrarse a las labores de su orden y a la escritura Se dice que con los escritos de Dontildea Ana Mariacutea se podriacutean formar veinte tomos (Serrano y Sanz 268 282) Estas son algunas de sus obras Vida y muerte de Jesucristo Nuestro Sentildeor Vida del Seraacutefico Padre San Francisco de Asiacutes Vida de la iacutenclita Virgen Santa Clara Vida del sutiliacutesimo doctor Juan Duns Escoto

Pero no todas las monjas tuvieron vidas tan dedicadas al estudio y la oracioacuten Loacutegica-mente entre un nuacutemero tan grande de mujeres existioacute de todo y seriacutea un error pensar que todos los conventos femeninos estaban integrados por laquocaacutendidas palomasraquo Una monja en el siglo XVI y XVII teniacutea mucha maacutes fuerza que una mujer ordinaria ya que actuaban en grupo y la entrada a los recintos donde viviacutean estaba permitida solo a mu-jeres Esta situacioacuten las haciacutea mucho maacutes fuertes a todos los niveles que una mujer sola protegida uacutenicamente por su familia laquoLas monjas durante los siglos XVI y XVII lucharon por eludir la clausura y por zafarse del control que los frailes de las secciones masculi-nas de sus congregaciones ejerciacutean sobre ellasraquo (Vigil 230) Soacutelo un antildeo maacutes tarde que dontildea Ana Mariacutea del Costado de Cristo en 1651 y a 12 leguas de Meacutexico nacioacute la sin par Sor Juana Ineacutes de la Cruz hija de don Pedro Manuel de Asbaje natural de Vergara (Vizcaya) y de Dontildea Isabel Ramiacuterez de Santillana hija de espantildeoles (Serrano y Sanz 268 289) Por ser sin lugar a dudas la poeta maacutes importante de su tiempo y probable-mente la maacutes conocida del mundo hispano no profundizaremos en ella Su obra es un canto a la inteligencia y el exponente maacutes destacado de la literatura barroca americana tanto en prosa como en verso Destacareacute simplemente que Sor Juana Ineacutes pese a vivir en un sociedad donde no eran excesivas las libertades concedidas a las mujeres tuvo el caraacutecter y la determinacioacuten de dejarnos las maacutes bellas poesiacuteas amorosas que si bien estuvieron enmarcadas en un ambiente religioso como era de esperar por su condicioacuten

163ESPANtildeOLAS DE ULTRAMAR EN LA HISTORIA Y EN LA LITERATURA

pudieron transcender como unas de las maacutes bellas manifestaciones literarias que hoy en diacutea se conservan Fue su agudeza mental sensibilidad y cultura tal que no fueron suficientes los soacutelidos muros del convento para contener el genio de tan extraordinaria mujer Recordemos sus conocidiacutesimos versos en defensa de las mujeres

Hombres necios que acusaacuteisa la mujer sin razoacutensin ver que sois la ocasioacutende lo mismo que culpaacuteis142

Las metaacuteforas y la delicadeza que emplea en rebatir a su obispo en su laquoRespuesta a sor Filotea de la Cruzraquo no son solamente el epiacutetome del feminismo de su tiempo sino una de las maacutes brillantes manifestaciones del barroco hispano Poesiacutea teatro ensayo y un conocimiento extraordinario de las ciencias claacutesicas de su tiempo hacen de esta mujer un ejemplo extraordinario de las letras universales Ya son cientos los artiacuteculos y libros que se han escrito sobre Sor Juana y no dejan de aparecer tesis doctorales sobre los maacutes diversos temas conectados con la citada autora143 Como nos dice Stephanie Merrim en su documentada obra Early Modern Womenrsquos Writing and Sor Juana Ineacutes de la Cruz

She wrote and published on secular themes as atypical for a nun as human love Her remarkably extensive writings essayed and reenacted most of the (male) poetic dramatic theological and even philosophi-cal discourses of her times in the metropolis making her works a com-pendium of baroque culture in its diversity and syncretism Sor Juana self-creation as a learned women effectively toppled many of the walls in which she was materially enclosed and positioned her within the dynamic world of early modern European culture (xii)

No se debe dejar de mencionar a otras escritoras novohispanas de la eacutepoca que aun-que no fueron tan proliacuteficas y relevantes como Juana Ineacutes de la Cruz dejaron testimo-nio de algunos acontecimientos que tienen intereacutes socioloacutegico o testimonial Este es el caso de Dontildea Mariacutea Estrada Medinilla de igual nombre y apellido que la mujer que acompantildeoacute a las tropas de Corteacutes en su primera entrada a Meacutexico Natural de Meacutexico publicoacute toda su obra a mediados del siglo XVII concentraacutendose principalmente en la lle-gada del Marqueacutes de Villena virrey y capitaacuten general de la Nueva Espantildea a la ciudad de Meacutexico en el antildeo 1640 Escrita en octavas reales la obra trata de las fiestas de toros y cantildeas con que se obsequioacute al citado virrey Fue impresa en Meacutexico en 1641 (Serrano y Sanz 269 402)

Mucho maacutes importante para el presente libro es Dontildea Isabel de Guevara que escribioacute en 1556 la carta en que se expone la ayuda que ofrecieron las mujeres en el descubri-miento y conquista del Riacuteo de la Plata No cabe la menor duda de que esta carta es uno

142 Para una mejor comprensioacuten del caraacutecter de esta excepcional mujer veacutease entre los numeros trabajos publicados Fredo Arias de la Canal Intento de psicoanaacutelisis de Juana Ineacutes y otros ensayos sorjuanistas (Meacutexico Frente de Afirmacioacuten Hispanista 1972) 47

143 Veacuteanse entre otros trabajos Octavio Paz Sor Juana Ineacutes de la Cruz o las trampas de la fe Georgina Sabat de Rivers En busca de Sor Juana Margo Glantz Sor Juana la comparacioacuten y la hipeacuterbole Gerard C Flynn Sor Juana Ineacutes de la Cruz Stephanie Merrim Feminist perspectives on Sor Juana Ineacutes de la Cruz Pamela Kirk Sor Juana Ineacutes de la Cruz religion art and feminism

164 JUAN FRANCISCO MAURA

de los documentos maacutes importantes con que contamos en relacioacuten a la aportacioacuten fe-menina en el proceso de la conquista de Ameacuterica Su importancia viene dada por varios factores Primero es uno de los primeros testimonios mdashsi no el primeromdash en donde se expone abiertamente la indispensable colaboracioacuten de las mujeres en el descubrimien-to y conquista de tierras en el Nuevo Mundo laquoQue si no fuera por ellas todos fueran acabadosraquo En segundo lugar la informacioacuten vertida en estas liacuteneas presenta en parte la manera de pensar de una mujer espantildeola en tales circunstancias Extraordinario tes-timonio de primera mano que nos da una idea de lo que significoacute en muchos casos el valor y entrega constantes de muchas de estas mujeres que auacuten a riesgo de perder sus vidas no dudaron en luchar al lado de los hombres por una causa que consideraban laquocomuacutenraquo

La relevancia histoacuterica de dicha carta hace que merezca ser transcrita en su totali-dad

Carta de dontildea Isabel de Guevara a la princesa gobernadora dontildea Juana exponiendo los trabajos hechos en el descubrimiento y conquista del Riacuteo de la Plata por las mujeres para ayudar a los hombres y pidiendo repartimiento

para su marido Asuncioacuten 2 de julio de 1556

Muy alta y muy poderosa sentildeora

A esta provincia del Riacuteo de la Plata con el primer gobernador de ella don Pedro de Mendoza hemos venido ciertas mujeres entre las cuales ha querido mi ventura que fuese yo la una y como la armada llegase al puerto de Buenos Aires con mil quinientos hombres y les faltase el bastimento fue tamantildea el hambre que a cabo de tres meses murie-ran los mil esta hambre fue tamantildea que ni la de Jerusalem se le puede igualar ni con otra ninguna se puede comparar Vinieron los hombres en tanta flaqueza que todos los trabajos cargaban de las pobres mu-jeres asiacute en lavarles las ropas como en curarles hacerles de comer lo poco que teniacutean limpiarlos hacer centinela rondar los fuegos armar las ballestas cuando algunas veces los indios les veniacutean a dar guerra hasta cometer a poner fuego en los versos y a levantar los soldados los que estaban para ello dar arma por el campo a voces sargentean-do y poniendo en orden los soldados porque en este tiempo como las mujeres nos sustentamos con poca comida no habiacuteamos caiacutedo en tanta flaqueza como los hombres Bien creeraacute V A que fue tanta la so-licitud que tuvieron que si no fuera por ellas todos fueran acabados y si no fuera por la honra de los hombres muchas maacutes cosas escribiera con verdad y los diera a ellos por testigos Esta relacioacuten bien creo que la escribiraacuten a V A maacutes largamente y por eso cesareacute Pasada esta tan peligrosa turbunada determinaron subir el riacuteo arriba asiacute flacos como estaban y en entrada de invierno en dos bergantines los pocos que quedaron vivos y las fatigadas mujeres los curaban y los miraban y les guisaban la comida trayendo la lentildea a cuestas fuera del naviacuteo y animaacutendolos con palabras varoniles que no se dejasen morir que presto dariacutean en tierra de comida metieacutendolos a cuestas en los

165ESPANtildeOLAS DE ULTRAMAR EN LA HISTORIA Y EN LA LITERATURA

bergantines con tanto amor como si fueran sus propios hijos Y como llegamos a una generacioacuten de indios que se llaman tinbues sentildeores de mucho pescado de nuevo los serviacuteamos en buscarles diversos modos de guisados porque no les diese en rostro el pescado a causa de que lo comiacutean sin pan y estaban muy flacos Despueacutes determinaron subir el Paranaacute arriba en demanda de bastimento en el cual viaje pasaron tanto trabajo las desdichadas mujeres milagrosamente quiso Dios que viviesen por ver que en ellas estaba la vida de ellos porque todos los servicios del naviacuteo los tomaban ellas tan a pechos que se teniacutea por afrentada la que menos haciacutea que otra sirviendo de marear la vela y gobernar el naviacuteo y sondar de proa y tomar el remo al soldado que no podiacutea bogar y escotar144 el naviacuteo y poniendo por delante a los soldados que no se desanimasen que para los hombres eran los trabajos verdad es que a estas cosas ellas no eran apremiadas ni las haciacutean de obliga-cioacuten ni las obligaba si solamente la caridad Asiacute llegaron a esta ciudad de la Asuncioacuten que aunque ahora estaacute muy feacutertil de bastimentos en-tonces estaba de ellos muy necesitada que fue necesario que las muje-res volviesen de nuevo a sus trabajos haciendo rosas con sus propias manos rosando y carpiendo y sembrando y recogiendo el bastimento sin ayuda de nadie hasta tanto que los soldados guarecieron de sus fla-quezas y comenzaron a sentildeorear la tierra y adquirir indios e indias de su servicio hasta ponerse en el estado en que ahora estaacute la tierra He querido escribir y traer a la memoria de V A para hacerle saber la ingratitud que conmigo se ha usado en esta tierra porque al presente se repartioacute por la mayor parte de los que hay en ella asiacute de los anti-guos como de los modernos sin que de miacute y de mis trabajos se tuviese ninguna memoria y me dejaron de fuera sin me dar indio ni ninguacuten geacutenero de servicio Mucho me quisiera hallar libre para me ir a presen-tar delante de VA con los servicios que a SM he hecho y los agravios que ahora se me hacen mas no estaacute en mi mano porque estoy casada con un caballero de Sevilla que se llama Pedro de Esquivel que por servir a SM ha sido causa que mis trabajos quedasen tan olvidados y se me renovasen de nuevo porque tres veces le saqueacute el cuchillo de la garganta como allaacute VA sabraacute A que suplico mande me sea dado mi repartimiento perpetuo y en gratificacioacuten de mis servicios [en el origi-nal del AHN Diversos doc 141 dice ademaacutes mande que sea proveydo mi marido de alguacuten cargo conforme a la calidad de su persona pues el de su parte por sus servicios lo merece] lo merece Nuestro sentildeor acre-ciente su Real vida y estado por muy largos antildeos De esta ciudad de la Asuncioacuten y de julio 2 1556 antildeosServidora de V A que sus Reales manos besa

Dontildea Isabel Guevara

144 Sacar agua de un riacuteo acequia o presa

166 JUAN FRANCISCO MAURA

Sobremdash A la muy alta y muy poderosa sentildeora Princesa dontildea Joana Gobernadora de los reinos de Espantildea etc ndash En su Consejo de Indias (Isabel de Guevara 619-21)

Iroacutenicamente la carta teniacutea que llegar a manos de la desdichada heredera del trono de Castilla e hija de los Reyes Catoacutelicos Juana laquola Locaraquo que habiacutea muerto el antildeo an-terior Son profeacuteticas las palabras de esta mujer no soacutelo porque sus hechos personales quedasen en el olvido sino porque incluso se ha borrado la historia de las mujeres en el Nuevo Mundo negando su presencia Por lo menos Isabel Guevara tuvo acceso a una pluma iquestCuaacutentas seriacutean las que ni siquiera sabriacutean escribir

Otra contemporaacutenea fue dontildea Leonor de Iciz que vivioacute durante la segunda mitad del siglo XVI Interesa sobre todo por los sonetos que escribioacute en elogio de Ercilla soldado que participoacute en la conquista de Chile y que se inmortalizoacute con su obra La Araucana (Serrano y Sanz 269 534) Lo mismo hizo Dontildea Bernarda Lintildeaacuten en 1610 autora de otro soneto en memoria del capitaacuten Gaspar Peacuterez de Villagraacute que participoacute en la conquista de Nuevo Meacutexico (Serrano y Sanz 270 14) Los escritos de estas mujeres tratan de de dos de las eacutepicas maacutes dramaacuteticas de la conquista

En el Peruacute y en pleno siglo XVII aparece otra fundadora de conventos Sor Bernardina de Jesuacutes que ademaacutes fue comparada con Santa Teresa por la semejanza de sus laquocartasraquo con las de la santa de Avila Fue fundadora del convento de Tacunga en Quito maacutes tarde destruiacutedo por un terremoto Dice Serrano y Sanz con respecto a su biografiacutea un tanto legendaria que fue carmelita descalza de Lima y hermana de Dontildea Mariacutea Benavides y Esquivel abuela de D Pedro de Peralta Barnuevo (Serrano y Sanz 269 553) Dicen que esta santa se alimentoacute durante treinta antildeos con laquochochos y caacutescaras de naranja hecho tan raro como increiacuteble Cuando fallecioacute reparaban las monjas en ponerle una vara de azucenas porque habiacutea sido casada y aquellas flores aparecieron milagrosamente sobre el cadaacuteverraquo (Serrano y Sanz 269 553)

Otra limentildea del primer cuarto del siglo XVII con reputacioacuten de santa fue Dontildea Luisa Melgarejo En este caso no se trata de una religiosa de oficio sino de la mujer del doctor Juan de Soto La uacutenica diferencia es que dontildea Luisa al parecer teniacutea laquovisiones y reve-lacionesraquo lo que debioacute poner nervioso a maacutes de un miembro del tribunal del laquoSanto Oficioraquo que consideraron sus escritos laquoculpadosraquo De su papel de laquosantaraquo pasa por lo tanto al de laquoposesaraquo o laquoendemoniadaraquo El inquisidor de Lima Gaitaacuten escribioacute un infor-me donde a traveacutes de la opinioacuten puacuteblica y de otras averiguaciones se deciacutea que dontildea Luisa Melgarejo laquomujer santaraquo sabiacutea cuando las almas de los difuntos saliacutean del Purga-torio El diacutea 14 de noviembre de 1623 se decidioacute tomar posesioacuten de todos los cuadernos en los que habiacutea escrito las experiencias de todos sus laquoarrobos suspensiones extasis y revelacionesraquo Estos cuadernos una vez recogidos presentaron toda una serie de al-teraciones borrones adiciones enmiendas incluso diferente letra por lo que despueacutes de haber sido examinados resultaron culpables145 Excelente imaginacioacuten debioacute tener dontildea Luisa Melgarejo la suficiente al parecer para convencer a algunos miembros de la iglesia de que en sus escritos laquohabiacutea algoraquo que mereciacutea la pena Estas cosas ocurriacutean en Lima uno de los centros culturales maacutes importantes de la vida social y poliacutetica en la Ameacuterica espantildeola Lima a comienzos del siglo XVII seguacuten el empadronamiento llevado

145 Serrano y Sanz 270 47 Veacutease J T Medina Historia del tribunal del Santo Oficio de la Inquisicioacuten de Lima (1569-1820) (Santiago Imprenta Gutemberg 1887) Tomo II 34-41

167ESPANtildeOLAS DE ULTRAMAR EN LA HISTORIA Y EN LA LITERATURA

a cabo en 1614 por el marqueacutes de Montesclaros era una ciudad de 25000 habitantes de los que 11000 eran espantildeoles El nuacutemero de religiosos y religiosas llegaba a 1720 (Pittaluga 77)

Se sabe que en la Isla de Santo Domingo durante el siglo XVI nacioacute o al menos resi-dioacute una poeta de ceacutelebre apellido en los aconteceres del Nuevo Mundo Dontildea Elvira de Mendoza de la que se conserva un manuscrito en la Real Academia de la Historia laquoCantares miacuteos que estaacuteis rebeladosraquo Eugenio de Salazar hace un elogio de ella como poeta en un Soneto a la ilustre Poeta y Sentildeora Dontildea Elvira de Mendoza moradora en la ciudad de Santo Domingo (Serrano y Sanz 270 53)

Nacida en Burgos sobre el antildeo 1590 dontildea Luisa de Padilla merece un lugar aparte dentro del grupo de mujeres escritoras de su eacutepoca Por su estilo faacutecil y castizo su no-vedad de pensamientos y su rica erudicioacuten recibioacute el siguiente comentario de Manuel Serrano y Sanz laquoPocas figuras hay en nuestra historia literaria femenil que puedan compararse a esta eminente prosista acaso la maacutes notable de cuantas florecieron en Es-pantildea durante el siglo XVIIraquo (Serrano y Sanz 270 95-96) Este comentario y comparacioacuten deberiacutea ampliarse para que tambieacuten incluyese a laquola historia literaria varonilraquo

Dontildea Luisa fue defensora de la labor que la Inquisicioacuten estaba realizando en la laquolim-piezaraquo de mujeres laquosoldados del demonioraquo que existieron en algunas provincias espa-ntildeolas en aquel tiempo Muchas de las mujeres que combinaban la magia con los po-deres curativos fueron condenadas no solamente por hombres de la Inquisicioacuten sino tambieacuten por mujeres de todas las clases sociales como es el caso de Luisa de Padilla condesa de Aranda En su obra Elogios de la verdad e invectiva contra la mentira preveniacutea contra aquellos que practicaban artes en contra de la religioacuten cristiana La magiacutea negra seguacuten Padilla era la causante de que muriesen casi tantas personas como otras causas naturales habieacutendose descubierto hasta seis mil brujas en Vizcaya y Guipuzcua con-fesando una mujer de un pueblo pequentildeo haber matado con su laquomagiaraquo a ochocientas personas (Perry 31) Eran estos laquomales de ojoraquo y maldiciones seguacuten la autora las causas de que se secasen los pechos de las madres lactantes que se separasen las parejas casa-das y que abortasen las embarazadas (Perry 31)

Si se tiene en cuenta que dontildea Luisa estuvo emparentada con la maacutes rancia aristocra-cia de su tiempo o lo que es lo mismo con algunos de aquellos que en cierta manera dirigiacutean los destinos de Espantildea en aquella eacutepoca (Duques de Lerma Duque de Uceda Marqueacutes de Cueacutellar Conde de Santa Gadea Marqueacutes de Belmonte por citar algunos) se comprenderaacute mejor su identificacioacuten con una institucioacuten que en teoriacutea velaba por la salvaguarda de los valores laquoeternosraquo de una Espantildea destinada a ser la campeona del ca-tolicismo durante los siglos XVI y XVII El padre de dontildea Luisa fue don Martiacuten de Padilla y Manrique extraordinario militar que proboacute su valor contra enemigos moriscos ingle-ses holandeses piratas berberiscos y el renegado genoveacutes Muley Faxad Fue veterano de la batalla de Lepanto donde apresoacute a cuatro galeras y acompantildeoacute con su escuadra a la reina Dontildea Margarita de Austria cuando vino de Geacutenova en 1598 laquoHabiacutea obtenido a 24 de julio de 1587 el tiacutetulo de Conde de Santa Gadea y en 1596 el de Capitaacuten General de la Armada del mar Oceacuteanoraquo (Serrano y Sanz 27095-96)

Por otra parte tambieacuten se sabe que dontildea Luisa participoacute directamente y desde tem-prana edad en la praacutectica de algunas actividades intelectuales como la historia y la arqueologiacutea a la vez que dedicaba su tiempo a virtudes cristianas como la caridad y el socorro de los necesitados (Serrano y Sanz 270 97) Resulta mucho maacutes faacutecil compren-

168 JUAN FRANCISCO MAURA

der la postura ideoloacutegica de esta gran mujer si tienen en cuenta ademaacutes de los factores antes mencionados otros tantos de caraacutecter biograacutefico concernientes a su educacioacuten y matrimonio

Otra escritora fue la mexicana dontildea Mariacutea Casilda Pozo natural de Temestla (Meacutexi-co) Nacida en el mes de abril de 1682 dejoacute escrita su biografiacutea en 16 cuadernos el ma-nuscrito original se encuentra en la biblioteca del colegio de San Gregorio de Meacutexico Fue su confesor el jesuiacuteta Domingo Quiroga que fue quieacuten la incitoacute a escribir su obra (Serrano y Sanz 270 137) Sor Juana de San Antonio aparece a principios del siglo XVII formando parte de un grupo de religiosas espantildeolas que fueron a Manila por la ruta de Meacutexico Ademaacutes de distinguirse por sus cualidades personales su obra interesa por ofrecer informacioacuten testimonial y costumbrista acerca de la forma de vestir de chinos y japoneses (Serrano y Sanz 270 225)

Otra monja esta vez ecuatoriana fue Gertrudis de San Ildefonso Nacida en 1652 profesoacute su vocacioacuten en el convento de Santa Cruz de Quito dejando escrita su vida por mandato de su confesor el padre Martiacuten de la Cruz el cual hizo una biografiacutea laquoen tres gruesos voluacutemenesraquo Gertrudis de San Ildefonso murioacute en 1709 (Serrano y Sanz 270 300) en olor de santidad

Sor Mariacutea Ana Agueda de San Ignacio nacioacute el 3 de marzo de 1695 en la dioacutecesis de la puebla de los Angeles en un rancho del lugar de Santiago Tecaliacute (Serrano y Sanz 270300) Esta monja mexicana escribioacute varias obras durante su vida conventual a lo largo de la cual desempentildeoacute el cargo de priora por muchos antildeos Entre sus obras todas de caraacutecter piacuteo y de laquoamor divinoraquo escribioacute un curioso y laquocopiosoraquo tratado de la Leche virginal de la Soberana Madre de Dios El padre Fr Juan de Villa Saacutenchez hace el siguiente comentario al respecto laquoen que hablando primero en sentido natural de los beneficios que debemos a Nuestra Sentildeora pasa a tratar en sentido miacutestico y alegoacuterico enten-diendo en la leche la doctrinaraquo (Serrano y Sanz 270301) Mexicana fue tambieacuten Sor Petronila de San Joseacute que ejercioacute como abadesa del Real monasterio de Jesuacutes Mariacutea de la ciudad de Meacutexico Escribioacute Vidas de varias religiosas ejemplares obra que tiene su im-portancia ya que al parecer laquoDe esta obra se sirvioacute D Carlos de Siguumlenza y Goacutengora para escribir su Parayso Occidental (Meacutexico 1684) seguacuten eacutel mismo declara en el proacutelogo diciendo lsquoa quien si hay algo bueno en esta historia se le debe todorsquoraquo (Serrano y Sanz 270 354) Menos conocida fue su compatriota Sor Luisa de Santa Catalina natural de Xacona laquopueblo situado en las inmediaciones de Zamora (Meacutexico)raquo siendo bautizada en 1682 Escribioacute Cartas espirituales a su confesor el P Juan Loacutepez de Aguado (Serrano y Sanz 270 361-62)146

Todos estos escritos la mayoriacutea de ellos ignorados por el gran puacuteblico tienen la im-portancia de darnos una perspectiva diferente En otras palabras ensentildearnos la maacutes refinada sensibilidad de muchas mujeres que permanecieron y en su mayoriacutea siguen permaneciendo a laquooscurasraquo de una eacutepoca tan rica de la literatura espantildeola como fue el Siglo de Oro Este siglo fue tambieacuten en su dimensioacuten literaria y artiacutestica patrimonio de la mujer

146 Para profundizar en muchas de estas escritoras hispano-americanas la consulta de la Biblioteca Hispano-Americana de Beristain de Souza resulta de capital importancia

169ESPANtildeOLAS DE ULTRAMAR EN LA HISTORIA Y EN LA LITERATURA

Sor Nada ardores divinos de una monja adolescente escritos ineacutedi-tos de una recieacuten profesa del siglo XVI147

iexclQueacute encantadores son tus amores hermana miacutea espo-sa iexclQueacute deliciosos son tus amores maacutes que el vino Y el aroma de tus perfumes es mejor que el de los baacutelsamos Miel virgen destilan tus labios esposa miel y leche hay en tu lengua y el perfume de tus vestidos es como aroma de incienso (Cantar de los Cantares 4 10-11)

Sor Nada llamada asiacute por humildad seguacuten dice el Indice de manuscritos de la Biblio-teca Nacional de Madrid es uno de los ejemplos maacutes desconocidos e interesantes que tenemos de la poesiacutea y prosa amoroso-religiosa del siglo XVII Hasta la fecha nunca se habiacutea publicado su obra e incluso hasta el antildeo 1995 para mi sorpresa no habiacutea copias microfilmadas de sus manuscritos en la Biblioteca Nacional Serrano y Sanz en su libro Apuntes para una Biblioteca de Escritoras Espantildeolas hace una escueta y pasajera mencioacuten de esta mujer y de su obra (68-69) siendo eso todo lo que hasta ahora se sabiacutea de ella Sus escritos consisten en los siguientes manuscritos

1 laquoEn queacute consiste un verdadero amor de Diosraquo 9 hojas uacutetiles en 4ordm letra del siglo XVII Biblioteca Nacional de Espantildea Manuscrito 1295926

2 laquoPintura del Propio Amorraquo laquoPintura del propio Amorraquo 10 hojas uacutetiles en 4ordm letra del siglo XVII Biblioteca Nacional de Espantildea Manuscrito 1295927

3 laquoEsplicacioacuten sobre en queacute consiste la paz del Almaraquo laquoQuartillas aacute un Alma que padece soledad interiorraquo 7 hojas uacutetiles en 4ordm letra del siglo XVII Biblioteca Nacio-nal de Espantildea Manuscrito 1295828

En cuanto a su persona soacutelo se nos dice que laquose encubrioacute con este seudoacutenimo laquoSor Nadaraquo Esta monja desconocida de origen hispanoamericano posee toda la frescura e ingenuidad de una joven apasionada metida por vocacioacuten u obligacioacuten a ejercer la profesioacuten maacutes comuacuten para mujeres de cierta clase social de su tiempo En sus liacuteneas podemos encontrar un misticismo simple incluso en algunos momentos infantil pero a su vez lleno de una fuerza y sensualidad interior poco comuacuten en escritos de este geacute-nero que desborda los liacutemites del laquoamor divinoraquo a traveacutes de los diaacutelogos entre el Alma y el Esposo Sor Nada consigue proyectar su amor a Dios maacutes allaacute de una experiencia romaacutentica Su experiencia es sincera y genuinamente miacutestica trascendiendo la imita-cioacuten o la propia creacioacuten poeacutetica ficcionalizada (Hatzfeld 30) Algunos pasajes son de un

147 Veacutease mi artiacuteculo Sor Nada ardores divinos de una monja adolescente escritos ineacuteditos de una monja profesa del siglo XVIIraquo Espeacuteculo Revista de estudios literarios 26 (2004) 1-10 Universidad Complutense de Madrid http wwwucmesinfoespeculonumero26sornadahtml

170 JUAN FRANCISCO MAURA

alto contenido eroacutetico con sustantivos y metaacuteforas que recuerdan la maacutes iacutentima unioacuten amorosa en unos casos y el tierno amor maternal en otros

[T]e miro Jesus mio desnudo a las inclemencias del tiempo y ardien-do en puro fuego de Amor por la salud de las Almas y me ensentildeas a que te ame con todo mi corason y puresa de espiritu No atendiendo ni buscando umanos intereses ni a solisitar consuelos ni regalos espi-rituales que suelen empantildear la puresa del noble corason No mi Jesus amable pues antes me ensentildeaste tu puro Amor que desnudo sean [sic] de encaminar mis passos desde el pesebre asta la cuna en donde te miro tan desnudo como el pesebre y todo Sentildeor por mi Amor (Mss 12959 26 hoja 1 v)

El manuscrito (12959 27) de la mencionada serie de tres contiene algunas correccio-nes quizaacute hechas por el confesor o quizaacute por ella misma cuando se dirige con excesiva familiaridad y arrebatado fervor a su Amado148 He escogido el manuscrito (12959 Caja 28) en primer lugar por ser el ejemplo maacutes representativo de su poesiacutea y prosa En este manuscrito encontramos de forma maacutes directa que alegoacuterica toda la frescura de un diaacutelogo entre Jesuacutes y el alma que raya como diriacutea Cervantes laquoa la llana y sin rodeosraquo (667 lib 2 cap 38) con el doloroso y a veces desesperado deseo de la entrega y la unioacuten final con el Amado La ortografiacutea no ha sido corregida respetaacutendose el texto ori-ginal149 Veamos el siguiente fragmento

Mira que te amo con Amor de padre y con Amor de esposo el mas fino y puro enamorado que no tan solo me presio de darte mi mano sino tambien todo mi cuerpo y sangre para que con mi pan de vida te sustentes y te regales a tus anchuras y que con mi propio espiritu vivas en paz como tu lo deseas y que mis amores sean unico alivio en tus trabajos en esta mortal vida pues si esto es asi y sabes que muero por darte vida dime esposa mia de que te fatigas Dame querida tus bras-sos y dime si me amas como yo te amo (Hoja 4)

148 La antologiacutea de Promis ha procurado insertar entre los textos antoloacutegicos algunos que se refieren a la es-critura de mujeres fundamentalmente de aquellos generados en el interior de los espacios conventuales Estos textos se fundan como laquohistorias de vidasraquo y responden casi siempre a los requerimientos de los confesores de las monjas coloniales En este sentido resulta valiosiacutesima la incorporacioacuten de la llamada Relacioacuten autobiograacute-fica de Sor Ursula Suaacuterez como una muestra significativa de la escritura monjil entendida en esta eacutepoca (como tambieacuten en la tradicioacuten europea medieval) inserta en las denominadas laquolabores de manoraquo de las religiosas ya que el texto escrito por mandato se convertiacutea en una suerte de entramado o tejido linguumliacutestico es decir en un nuevo bordado que la mayor parte de las veces el confesor convertido en censor iba haciendo tachando y enmendando En la antologiacutea Promis agrega un texto de Sor Tadea Garciacutea de la Huerta titulado Relacioacuten de la inundacioacuten que hizo el riacuteo Mapocho de la ciudad de Santiago de Chile en el monasterio de Carmelitas titular de San Rafael el diacutea 16 de junio de 1783 se trata de un poema tipo romance escrito en versos octosilaacutebicos y que da cuenta de lo sucedido ese diacutea en el convento (Resentildea de la literatura del reino de Chile de Joseacute Promis Eddie Morales Pintildea httpwwwupaclpublicaciones2002literatura_promishtm)

149 Son frecuentes las faltas ortograacuteficas Una de ellas es el uso constante del seseo La ausencia de acentua-cioacuten y puntuacioacuten exceptuando alguacuten punto o coma arbitrario no seguido casi nunca de mayuacutescula inicial lo mismo que el uso igualmente aribitrario de la h o de b v r q g j m n x etc No olvidemos de la misma forma la laxitud linguumliacutestica existente en el siglo XVII (no sabemos a queacute parte de eacuteste pertenece el manuscrito) asiacute como la joven edad de la monja

171ESPANtildeOLAS DE ULTRAMAR EN LA HISTORIA Y EN LA LITERATURA

Los versos del presente manuscrito poseen la misma fuerza que tiene su prosa Con una estructura estroacutefica indefinida estaacuten aparentemente corregidos por alguien que tu-vo la oportunidad de conocer personalmente a la autora Muy probablemente se trate del padre al que hace referencia al principio del primer manuscrito laquoMandame el Pd que le declare en que consiste un verdadero amor a Diosraquo a continuacioacuten continuacutea con su caracteriacutestica humildad laquo[O]bedesere y dire lo q Dios me inspire segun mi rudesa y simplisidadraquo (Mss 12959 26) En cuanto a la fuerza pasional de esta joven observamos con cierta tristeza coacutemo aparece sublimada en sus escritos con toda la enegiacutea de una joven mujer llena de intensidad y vida pero encerrada en los liacutemites de un convento Veamos un ejemplo en donde responde el Alma en los siguientes versos

O mi enamorado Jesus O mi dulse y tierno amanteO alegria de los sielos O dulse Jesus amable

(Toda Sentildeor me derrito toda Sentildeor me desagoy quiero vivir por ti ea sentildeor abrasadme) [Tachado en el original]

Toda Sentildeor me derrito toda Sentildeor me desagoy quiero morir por vos ea Sentildeor que ya acabo

Ya tus amores me llaman ya tus perfumes me traencon suspiros y agonias Sentildeor hasta que te alcanse

O mi Jesus amoroso no puedo mas dilatarmeya la pasiensia me falta dulse Jesus abrasadme

(No puedo vivir sin vos no puedo mas dilatarmeya la pasiensia me falta dulse) [Tachado en el original]

No puedo vivir sin vos mi dulse Jesus amablepues me teneis echisada siendo mi esposo y mi Padre

Ay que me abraso Ay que me quemo del Amor deJesus nasareno como no tocan y tantildeen a fuego150

Estos versos llenos de arrebato sublimado conectan con toda la tradicioacuten miacutestica es-pantildeola que se remonta a Ramoacuten Llul y que culmina en el maacutes universal de nuestros

150 En toda la fuerza y simbologiacutea del amor maacutes iacutentimo del maacutes alto y sublime placer de la unioacuten de los amantes tal como lo encontramos en el Cantar de los Cantares y en San Juan de la Cruz Leemos en la Biblia

Ya me he quitado la tuacutenica iquestCoacutemo volver a vestirme Ya me he lavado los pies iquestCoacutemo volver a ensuciarlosMi amado metioacute su mano por el agujero (de la llave) y mis entrantildeas se estremecieron por eacutel Me levanteacute para abrir a mi amado Mis manos destilaron mirra y mis dedos mirra exquisita en el pestillo de la cerradura (5 3-5)

Nos ocurre lo mismo con San Juan de la Cruz en su insuperable poema laquoLlama de amor vivaraquo

iexclOh cauterio suaveiexclOh regalada llagaiexclOh mano blanda iexclOh toque delicadoque a vida eterna sabey toda deuda pagaMatando muerte en vida la has trocado

172 JUAN FRANCISCO MAURA

miacutesticos San Juan de la Cruz Esta tradicioacuten se extiende hasta finales del siglo XVII esto es hasta los finales del Barroco siendo un poco maacutes tardiacuteo en la Ameacuterica espantildeola Sin tener como propoacutesito discutir en el presente trabajo a queacute corriente miacutestica pertenece la obra de Sor Nada es necesario resaltar no obstante el hecho de que estaacute escrito por una mujer y ademaacutes de tierna edad El manuscrito 12959 Caja 26 termina con estas pa-labras laquo[T]odas estas boverias escrivi por entretenimiento siendo resien profesa en la religion Sor Nadaraquo Mas no por la juventud de su autora los escritos dejan de tener lo-gradas metaacuteforas imaacutegenes y siacutembolos sacados de la naturaleza La alegoriacutea de la unioacuten matrimonial poseeacute el fuego liacuterico de la maacutes apasionada de las relaciones amorosas vivi-ficada por perfumes flores insectos animales escarchas nieves o abrojos Por lo tanto aunque la narracioacuten destile cierta ingenuidad no carece por ello de un vocabulario rico con el sabor popular de la poesiacutea de los cancioneros y romances de tradicioacuten renacen-tista No ha sido otra mi intencioacuten que la de rescatar del olvido unos escritos en prosa y en verso llenos de frescura y espontaneidad que nos muestran la pasioacuten con que la joven novicia se laquoentrega en cuerpo y almaraquo a los menesteres de su profesioacuten guiada por un padre espiritual en esos primeros antildeos de formacioacuten Esta ha sido la razoacuten por la que presento a continuacioacuten el citado manuscrito en su totalidad

Sor Nada (Mss 1295928)

laquoEsplicacion sobre en que consiste la paz del AlmaraquolaquoQuartillas a un Alma que padece soledad interiorraquo

[7 hojas utiles en 4ordm letra del siglo XVII]

+

Esplicacion sobre en que consiste la paz del Alma

Pareseme segun mi rudo entender que la verdadera paz del Alma con-siste en una muy pura y buena consiencia en un corason liso y bien intensionado en una verdadera rectitud de espiritu en el qual el Alma procura bolar a Dios sin jamas detenerse a respetos umanos ni reparar en que me diran ni de que me censuraran sino me apresuro a seguir a unos entenderes y pareseres dorados en los quales pretende el mundo engantildear y ensuciar si se puede la puresa de un corason unicamente de Dios y de su Santa ley y se lo conserva cristalino con la divina asis-tencia de la gracia y comprendido de su Amor y temor siguiendo la luz divina de tan amante Sentildeor Dios y ombre verdadero con que este ilustrado corason ni se altera ni se mueve por los disfrasses dorados que ase el mundo y sus moradores mayormente con falssas amistades aunque con ellos muestre buena intension Con la misma grasia y luz de Dios conose el buen corason estos disfrasses que le ase el mundo y se retira de todo con espiritu y valor esto sin la menor alterasion sino que en suma paz se retira a buscar a Dios dentro de su mismo corason

173ESPANtildeOLAS DE ULTRAMAR EN LA HISTORIA Y EN LA LITERATURA

y se abrasa con su pura verdad en la qual se le descubren mil interio-res secretos tan solidos puros y verdaderos que la misma Alma queda abismada y de puro grandes no los puede bien comprender ni esplicar pero estos mismos secretos divinos le sirven de espuelas para no solo correr sino bolar con pies de plumas en seguimiento de su bien ama-do Jesus y como este soberano Sentildeor es tan amante de sus espossas las Almas luego que la ve bolar con pies de plumas la sale al encuen-tro en despoblado campo que se deve de llamar Campo de Amor de Dios y el mismo Sentildeor se viene a las manos por ser Dios que nos ama con Amor infinito de Padre benigno y amoroso con que asiendose en contra deso este divino enamorado en lo interyor de el Alma que le busca con ansias de servirle y amarle y en aquella soledad traban una conversasion amorosa y sensilla como la pluma simple de quien esto escrive

Divino enquentroDios y el Alma en la soledad

O Soberano Principe de la paz dise el Alma tus perfumes me traen a ti bolando porque alla en el mundo y sus valedores me pretendian engantildear y entretenerme con pegaminossas amistades que facilmen-te me pudieran envenenar y matarme apartandome de ti Mi dulse Jesus amable mi Redentor Soberano que con tantas ansias me sales al enquentro como siervo [ciervo] erido de mis Amores los quales tu Amor me ofrese para que con tu mismo Amor te ame y te sirva en paz sin perturbarme ni contristarme ni cansarme de padeser pasando si se ofrese por escarchas nieves espinas ni abrojos ni por otros diverssos trabajos ni piedras de contradision que tu me puedes permitir pues por mas que el mar se levante con sus ferosses olas contra mi ni piedras se me tiren al rostro en todo Sentildeor me quieres con serenidad pasifica sin la menor perturbasion Todo Sentildeor quieres que lo tome con Serenidad de espiritu y asi vengo a ti bolando para que mejor me ensentildees a vivir segun las leyes de tu noble condision que me son muy agradables por mas que el mundo me las despresie por segir sus vanidades y torsidas intensiones con apariensias de bien y con este engantildeo y bien me quie-ro mas a mi que no a mi proximo veo que segun mi pareser se pierden muchas Almas y tambien de aquellos que se depresian y pasan por muy espirituales Con que me paresen pocos los que llegan a padeser con desnudes151 de espiritu por tu purisimo Amor y me parese essas se quedan muy atrasadas en la virtud por el peligro de bolver muy atras el paso de modo que se pueden despentildear y pereser en su misma desgra-sia ya por soberbia o por otras enfermedades que se les pega al corason y asi lo pasan como siegos ignorantes sin advertir en sus peligros

151 La letra en cursiva es miacutea

174 JUAN FRANCISCO MAURA

este aquerdo Sentildeor y otros que tu verdad me ensentildea me ase venir uyendo de las paredes del mundo y me vengo a ti Dios mio bolando con las dos Alas del Amor y temor que tu mismo Amor me ofrese tan de gracia y tan de grado que no se duentildeo mio con que lo responder a tan soberano beneficio y finesa de tus entrantildeas de Amorvengo Sentildeor y esposo mio unicamente a descansar en ti pues los peli-gros del camino me an puesto en mucho sobresalto temiendo el per-derte y sin ti perderme para siempre por una eternidad sin fin pues deseo amado mio ganarme ganandote a ti y vivir en ti aora en vida y despues eternamente y estos cuidados me traen fatigada molida y cansada y no podre tener alivio y descanso sino viendome entre tus brassos aunque sea estando en cruz pues ese es el fin de mis deseos vivir y morir en ti ablame mi cordero manso y ensentildeame a que ver-daderamente te ame como fiel esposa ea mi caro amigo dame la ma-no pues sabes Amor mio que en mi no ay mano sin tu misma mano y asi mi Dios y Sentildeor mi Principe Soberano con umilde rendimiento y deseos de alcansarte te suplico me des la mano y me consueles en estos mis trabajos Deseo Sentildeor vivir en paz y los malos amores de mi Naturaleza flaca no me dejan detentar y no quieren por mi desgrasia atropellar con las leyes de tu Amor ni quisiera perturbar mi corason quando me veo con un torvellino de olas y contratiempos que a menu-do me suelen sercar pero si tu Sentildeor me das la mano nada temo sino que me aseguro y vivire en paz sin que me fatiguen los contratiempos pues mi mano en la tuya y mi espiritu en el tuyo por mas borrascas que me envistan no seran bastantes para rendir mi voluntad a la suya bien si para pronunsiar un fiat que resuene bien atras en tus oidos y que en medio de mis fatigas me ponga a cantar tus divinas misericor-dias hea Sentildeor ya pretendo serrar mis labios por no desir mas bove-rias y deseo Sentildeor oir tus palabras de vida eterna abla Sentildeor que tu sierva oye con atension y cuydado mira mi Dios que se me ase tarde y espero con prisa deseando saborearme y aprovecharme de los ecos de tu Santa dotrina pues todas tus palabras saben a eterna vida callen pues mis sentidos y potensias y todo se ponga en paz pues mi dulse y soberano Sentildeor no se escusara de ablar me aun que en mudo silensio hea mi gran Prinsipe de la paz ablame que tus puros amores me traen perdida por estos asperos montes y mis cortos pasos no te pueden dar alcanse mirame mi Dios a tus pies postrada como un vil gusano y me-nor ormiga de la tierraabla Jesus y dise a su esposa el Alma querida esposa mia que me pides y por que te muestras tan fatigada y mal sufrida no vives como corde-rita del campo buscando de mis pechos el sustancial pasto mi Amor no te sustenta y mi grasia te promete eterna vida pues dime amada de que te fatigas y te muestras mal sufrida mira que te amo con Amor de padre y con Amor de esposo el mas fino y puro enamorado que no tan solo me presio de darte mi mano sino tambien todo mi cuerpo y

175ESPANtildeOLAS DE ULTRAMAR EN LA HISTORIA Y EN LA LITERATURA

sangre para que con mi pan de vida te sustentes y te regales a tus an-churas y que con mi propio espiritu vivas en paz como tu lo deseas y que mis amores sean unico alivio en tus trabajos en esta mortal vida pues si esto es asi y sabes que muero por darte vida dime esposa mia de que te fatigas Dame querida tus brassos y dime si me amas como yo te amoResponde el Alma152 Tu mi Dios sabes si yo te amo pues de mi solo se que mis deseos y ansias buelan a ti mas no alcanso a saber si te amo como tu de-seas ser amado y como desconfio tanto de mi y de mis prosederes falssos temo Dios mio perderme y perderte y asi Sentildeor pues no desechas mis Amores y te muestras tan fino en amarme te pido me ensentildees a vivir segun las leyes de tu pura verdad y fina condisionhija mia dise Dios la prueva de un verdadero Amor consiste en sufrir callar y padeser por mi unico Amor y en todo seguir mis pasos sin ja-mas retroseder por mas fragoso que se muestre el camino pues nunca seran tantas las espinas las escarchas ni las nieves ni los vientos bo-rrascosos que te se ofrescan pasar por mi Amor como los que mi tierno y desinteresado Amor paso por ti y siempre con mis pies descalssos y asi hija y esposa mia muestrate costante en seguir lo perfecto de mis passos pues mi braso fuerte sera en ti y peleara por ti y te sera el todo en tus nesesidades y mi Amor te convertira en dulse y suave lo amargo y molesto a la condision de la carrne

Responde el Alma

O mi enamorado Jesus O mi dulse y tierno amanteO alegria de los sielos O dulse Jesus amable

(Toda Sentildeor me derrito toda Sentildeor me desagoy quiero vivir por ti ea sentildeor abrasadme) [Tachado en el original]

Toda Sentildeor me derrito toda Sentildeor me desagoy quiero morir por vos ea Sentildeor que ya acabo

Ya tus amores me llaman ya tus perfumes me traencon suspiros y agonias Sentildeor asta que te alcanse

O mi Jesus amoroso no puedo mas dilatarmeya la pasiensia me falta dulse Jesus abrasadme

(No puedo vivir sin vos no puedo mas dilatarmeya la pasiensia me falta dulse) [Tachado en el original]

No puedo vivir sin vos mi dulse Jesus amablepues me teneis echisada siendo mi esposo y mi Padre

152 La aparicioacuten de una mayuacutescula al principio de una oracioacuten es algo totalmente arbitrario en este ma-nuscrito dada la libertad ortograacutefica de la autora Como se puede observar en la mayor parte de las veces no es el caso

176 JUAN FRANCISCO MAURA

Ay que me abraso Ay que me quemo del Amor deJesus nasareno como no tocan y tantildeen a fuego

Responde Jesus Hija mia tus simples vozes oygo y aunque resuenan bien a mis oidos pero te deseo mas mansa y pasifica en tus fervores ya sabes que no siempre as de vivir en mantillas ni a los pechos de tu Madre por que es rason que padescas con espiritu fuerte como mu-jer valerosa por que a una esposa del Rey soberano y prinsipe de la paz no le estan bien chiquerias ni fervores de nintildea malcriada y ya es ora que la destete su Madre la Naturaleza y que empesando su nueva vida camine con el favor de mi grasia sigiendo mis passos de eterna vida esto con sus pies descalssos segun mis leyes de Amor puro y desinteresado lo tienen ordenado153 y vivir en paz como lo deje en-cargado a mis apostoles Santos repitiendoles varias vezes Vivir en pas y caridad esto es un vivir en Dios y Dios en el Alma y asi hija mia el Alma que vive en paz vive en mi Como mis cortesanos en el cielo y pues me pides que te ensentildee a vivir segun las leyes de mi condision Repito el desir que te debes mostrar sufrida en todo tiempo y estado sin permitir en tu corason que ni aun los fervores se adelanten con estremos ni ademanes sino atiende y aprende de mi purisima Madre pues siempre la veras si bien lo consideras que mientras vivio en el mundo en todos sus trabajos se mostro firme fuerte costante como piedra diamante Pues mirandome nintildeo entre sus brasos desnudo en el pesebre desnudo y crusificado en los brassos de una cruz En estos y otros passos no se mudo su rostro sino que en suma serenidad y pasifico corason toda se sacrificaba enteramente en los brassos de mi Amor y rendido su corason y voluntad en la de mi eterno Padre por ejemplo te la doy y deseo que aprendas de sus nobles calidades pues te aseguro carisima que las leyes de mi condision y pura verdad todo lo allaras enserrado en el corason de mi purisima Madre sedle fiel y descansaras en paz

+

Quartillas a un alma que padese soledad interior

1Un Alma afligida y tristese ve en un campo desiertay en el su esposo la tieneAtormentada y sedienta

153 Es a traveacutes de estas liacuteneas lo que hace suponer que la autora de este diaacutelogo amoroso entre el Alma y Je-suacutes es novicia esto es laquoque estaacute empesando su nueva vidaraquo En las mismas liacuteneas una vez maacutes se hace alusioacuten al laquodesteteraquo de su vida civil laquoa una esposa del Rey soberano y principe de la paz no le estan bien chiquerias ni fervores de nintildea malcriada y ya es ora que la destete su Madre la naturalesaraquo (fol 5)

177ESPANtildeOLAS DE ULTRAMAR EN LA HISTORIA Y EN LA LITERATURA

2Pendiente se ve en el AyreSolo un hilo la sustentasin tocar el pie en el sueloporque del no tome tierra

3Mirandola esta yto a ytoaquel sol que la atraviesay la enviste con sus rayosmas ella no pestantildeea

4Como sigarra padese y como a tal se atormentabatiendo sus mismas Alasy el corason se atraviesa

5Con penas sustos temoresquando se mira assi mesmasin tener valor en nadaporque es la misma flaquesa

6Pero el Amor de su esposotoda su atension le llevay la pone en un abismopero cubierto en tiniebla

7Desea dar algun bueloy subir con ligeresapero se mira travadacon una fuerte cadena

8Clama suspira y padeseMas del todo se sujetaRindiendo su voluntadA la divina clemencia

9Los enemigos del AlmaCruelmente le asen guerray ella aunque firme y constantelos reselos la atormentan

178 JUAN FRANCISCO MAURA

10de todos modos padeseaunque gosa la asistensiadel divino esposo amadoque en su interior se recrea

11Solo de verla penary con verla tan serenadise resibe mil gustosde su sigarra pequentildea

12Le sabe el mundo a mil yelesy su trato le atormentaviendo en el mil falsedadesque todas saben a tierra

13Para poderse librardeja de correr y buelacon las Alas del Amory el mismo Amor se la lleva

Una vida dedicada a un amor divino un amor que le haraacute llenar un buen nuacutemero de cuartillas dedicadas a tan alta empresa Se desconoce si la vocacioacuten de Sor Nada con-tinuoacute con tanta intensidad el resto de sus diacuteas Ciertamente la vida en el covento no era faacutecil En algunos casos la experiencia era traumaacutetica incluso fatal para algunas de las adolescentes de la Ameacuterica Espantildeola Las reglas del claustro eran severas por varias razones Estas joacutevenes si no teniacutean el permiso de la superiora no podiacutean recibir visitas no podiacutean volver a sus casas su correspondencia era censuraba y no podiacutean salir del periacutemetro conventual Igualmente se levantaban antes del amanecer para oir misa tra-bajaban el resto del diacutea y lo maacutes interesante es que muchas veces esta vida era aceptada por muchas

Page 32: Tercera parte: Mujeres en la vida intelectual - …parnaseo.uv.es/Editorial/Maura/TerceraParte.pdf · La Biblia, por su parte, hace repetidas menciones de la mujer y sobre el comporta-

162 JUAN FRANCISCO MAURA

embarcarse en tan precarias naves Fue la primera misionera de Oceaniacutea muriendo en Manila en 1621 Alliacute fundoacute el monasterio de Santa Clara que perviviriacutea hasta ser bom-bardeado en la Segunda Guerra Mundial (Trevintildeo 47) Escribioacute su Vida donde trata de la fundacioacuten del convento y de todas las tribulaciones mdashllegoacute a ser excomulgadamdash y satisfacciones que una vida dedicada a una causa justa proporciona Tambieacuten escribioacute una obra de caraacutecter filosoacutefico-teoloacutegico titulada Carta de marear en el mar del mundo nombre alegoacuterico que da cuenta de la enorme distancia recorrida a traveacutes del laquomar del espiacuterituraquo por sor Jeroacutenima He aquiacute algunos de sus versos de caraacutecter religioso

Vuestra soy para vos naciacuteiquestQueacute mandaacuteis hacer de miacute Inaccesible grandezaEterna Sabiduriacuteay bondad del alma miacuteaDios un ser poder y Altezamirad la suma pobrezade eacutesta que se ofrece aquiacuteiquestQueacute mandaacuteis hacer de miacute (Serrano y Sanz 268 66)

Ya en Meacutexico tenemos otro ejemplo de una mujer dedicada por completo a Dios y al estudio y composicioacuten de obras de caraacutecter teoloacutegico Dontildea Ana Mariacutea del Costa-do de Cristo nacida en la ciudad de Tlaxcala hacia el antildeo 1650 Tomoacute la orden de San Francisco para consagrarse a las labores de su orden y a la escritura Se dice que con los escritos de Dontildea Ana Mariacutea se podriacutean formar veinte tomos (Serrano y Sanz 268 282) Estas son algunas de sus obras Vida y muerte de Jesucristo Nuestro Sentildeor Vida del Seraacutefico Padre San Francisco de Asiacutes Vida de la iacutenclita Virgen Santa Clara Vida del sutiliacutesimo doctor Juan Duns Escoto

Pero no todas las monjas tuvieron vidas tan dedicadas al estudio y la oracioacuten Loacutegica-mente entre un nuacutemero tan grande de mujeres existioacute de todo y seriacutea un error pensar que todos los conventos femeninos estaban integrados por laquocaacutendidas palomasraquo Una monja en el siglo XVI y XVII teniacutea mucha maacutes fuerza que una mujer ordinaria ya que actuaban en grupo y la entrada a los recintos donde viviacutean estaba permitida solo a mu-jeres Esta situacioacuten las haciacutea mucho maacutes fuertes a todos los niveles que una mujer sola protegida uacutenicamente por su familia laquoLas monjas durante los siglos XVI y XVII lucharon por eludir la clausura y por zafarse del control que los frailes de las secciones masculi-nas de sus congregaciones ejerciacutean sobre ellasraquo (Vigil 230) Soacutelo un antildeo maacutes tarde que dontildea Ana Mariacutea del Costado de Cristo en 1651 y a 12 leguas de Meacutexico nacioacute la sin par Sor Juana Ineacutes de la Cruz hija de don Pedro Manuel de Asbaje natural de Vergara (Vizcaya) y de Dontildea Isabel Ramiacuterez de Santillana hija de espantildeoles (Serrano y Sanz 268 289) Por ser sin lugar a dudas la poeta maacutes importante de su tiempo y probable-mente la maacutes conocida del mundo hispano no profundizaremos en ella Su obra es un canto a la inteligencia y el exponente maacutes destacado de la literatura barroca americana tanto en prosa como en verso Destacareacute simplemente que Sor Juana Ineacutes pese a vivir en un sociedad donde no eran excesivas las libertades concedidas a las mujeres tuvo el caraacutecter y la determinacioacuten de dejarnos las maacutes bellas poesiacuteas amorosas que si bien estuvieron enmarcadas en un ambiente religioso como era de esperar por su condicioacuten

163ESPANtildeOLAS DE ULTRAMAR EN LA HISTORIA Y EN LA LITERATURA

pudieron transcender como unas de las maacutes bellas manifestaciones literarias que hoy en diacutea se conservan Fue su agudeza mental sensibilidad y cultura tal que no fueron suficientes los soacutelidos muros del convento para contener el genio de tan extraordinaria mujer Recordemos sus conocidiacutesimos versos en defensa de las mujeres

Hombres necios que acusaacuteisa la mujer sin razoacutensin ver que sois la ocasioacutende lo mismo que culpaacuteis142

Las metaacuteforas y la delicadeza que emplea en rebatir a su obispo en su laquoRespuesta a sor Filotea de la Cruzraquo no son solamente el epiacutetome del feminismo de su tiempo sino una de las maacutes brillantes manifestaciones del barroco hispano Poesiacutea teatro ensayo y un conocimiento extraordinario de las ciencias claacutesicas de su tiempo hacen de esta mujer un ejemplo extraordinario de las letras universales Ya son cientos los artiacuteculos y libros que se han escrito sobre Sor Juana y no dejan de aparecer tesis doctorales sobre los maacutes diversos temas conectados con la citada autora143 Como nos dice Stephanie Merrim en su documentada obra Early Modern Womenrsquos Writing and Sor Juana Ineacutes de la Cruz

She wrote and published on secular themes as atypical for a nun as human love Her remarkably extensive writings essayed and reenacted most of the (male) poetic dramatic theological and even philosophi-cal discourses of her times in the metropolis making her works a com-pendium of baroque culture in its diversity and syncretism Sor Juana self-creation as a learned women effectively toppled many of the walls in which she was materially enclosed and positioned her within the dynamic world of early modern European culture (xii)

No se debe dejar de mencionar a otras escritoras novohispanas de la eacutepoca que aun-que no fueron tan proliacuteficas y relevantes como Juana Ineacutes de la Cruz dejaron testimo-nio de algunos acontecimientos que tienen intereacutes socioloacutegico o testimonial Este es el caso de Dontildea Mariacutea Estrada Medinilla de igual nombre y apellido que la mujer que acompantildeoacute a las tropas de Corteacutes en su primera entrada a Meacutexico Natural de Meacutexico publicoacute toda su obra a mediados del siglo XVII concentraacutendose principalmente en la lle-gada del Marqueacutes de Villena virrey y capitaacuten general de la Nueva Espantildea a la ciudad de Meacutexico en el antildeo 1640 Escrita en octavas reales la obra trata de las fiestas de toros y cantildeas con que se obsequioacute al citado virrey Fue impresa en Meacutexico en 1641 (Serrano y Sanz 269 402)

Mucho maacutes importante para el presente libro es Dontildea Isabel de Guevara que escribioacute en 1556 la carta en que se expone la ayuda que ofrecieron las mujeres en el descubri-miento y conquista del Riacuteo de la Plata No cabe la menor duda de que esta carta es uno

142 Para una mejor comprensioacuten del caraacutecter de esta excepcional mujer veacutease entre los numeros trabajos publicados Fredo Arias de la Canal Intento de psicoanaacutelisis de Juana Ineacutes y otros ensayos sorjuanistas (Meacutexico Frente de Afirmacioacuten Hispanista 1972) 47

143 Veacuteanse entre otros trabajos Octavio Paz Sor Juana Ineacutes de la Cruz o las trampas de la fe Georgina Sabat de Rivers En busca de Sor Juana Margo Glantz Sor Juana la comparacioacuten y la hipeacuterbole Gerard C Flynn Sor Juana Ineacutes de la Cruz Stephanie Merrim Feminist perspectives on Sor Juana Ineacutes de la Cruz Pamela Kirk Sor Juana Ineacutes de la Cruz religion art and feminism

164 JUAN FRANCISCO MAURA

de los documentos maacutes importantes con que contamos en relacioacuten a la aportacioacuten fe-menina en el proceso de la conquista de Ameacuterica Su importancia viene dada por varios factores Primero es uno de los primeros testimonios mdashsi no el primeromdash en donde se expone abiertamente la indispensable colaboracioacuten de las mujeres en el descubrimien-to y conquista de tierras en el Nuevo Mundo laquoQue si no fuera por ellas todos fueran acabadosraquo En segundo lugar la informacioacuten vertida en estas liacuteneas presenta en parte la manera de pensar de una mujer espantildeola en tales circunstancias Extraordinario tes-timonio de primera mano que nos da una idea de lo que significoacute en muchos casos el valor y entrega constantes de muchas de estas mujeres que auacuten a riesgo de perder sus vidas no dudaron en luchar al lado de los hombres por una causa que consideraban laquocomuacutenraquo

La relevancia histoacuterica de dicha carta hace que merezca ser transcrita en su totali-dad

Carta de dontildea Isabel de Guevara a la princesa gobernadora dontildea Juana exponiendo los trabajos hechos en el descubrimiento y conquista del Riacuteo de la Plata por las mujeres para ayudar a los hombres y pidiendo repartimiento

para su marido Asuncioacuten 2 de julio de 1556

Muy alta y muy poderosa sentildeora

A esta provincia del Riacuteo de la Plata con el primer gobernador de ella don Pedro de Mendoza hemos venido ciertas mujeres entre las cuales ha querido mi ventura que fuese yo la una y como la armada llegase al puerto de Buenos Aires con mil quinientos hombres y les faltase el bastimento fue tamantildea el hambre que a cabo de tres meses murie-ran los mil esta hambre fue tamantildea que ni la de Jerusalem se le puede igualar ni con otra ninguna se puede comparar Vinieron los hombres en tanta flaqueza que todos los trabajos cargaban de las pobres mu-jeres asiacute en lavarles las ropas como en curarles hacerles de comer lo poco que teniacutean limpiarlos hacer centinela rondar los fuegos armar las ballestas cuando algunas veces los indios les veniacutean a dar guerra hasta cometer a poner fuego en los versos y a levantar los soldados los que estaban para ello dar arma por el campo a voces sargentean-do y poniendo en orden los soldados porque en este tiempo como las mujeres nos sustentamos con poca comida no habiacuteamos caiacutedo en tanta flaqueza como los hombres Bien creeraacute V A que fue tanta la so-licitud que tuvieron que si no fuera por ellas todos fueran acabados y si no fuera por la honra de los hombres muchas maacutes cosas escribiera con verdad y los diera a ellos por testigos Esta relacioacuten bien creo que la escribiraacuten a V A maacutes largamente y por eso cesareacute Pasada esta tan peligrosa turbunada determinaron subir el riacuteo arriba asiacute flacos como estaban y en entrada de invierno en dos bergantines los pocos que quedaron vivos y las fatigadas mujeres los curaban y los miraban y les guisaban la comida trayendo la lentildea a cuestas fuera del naviacuteo y animaacutendolos con palabras varoniles que no se dejasen morir que presto dariacutean en tierra de comida metieacutendolos a cuestas en los

165ESPANtildeOLAS DE ULTRAMAR EN LA HISTORIA Y EN LA LITERATURA

bergantines con tanto amor como si fueran sus propios hijos Y como llegamos a una generacioacuten de indios que se llaman tinbues sentildeores de mucho pescado de nuevo los serviacuteamos en buscarles diversos modos de guisados porque no les diese en rostro el pescado a causa de que lo comiacutean sin pan y estaban muy flacos Despueacutes determinaron subir el Paranaacute arriba en demanda de bastimento en el cual viaje pasaron tanto trabajo las desdichadas mujeres milagrosamente quiso Dios que viviesen por ver que en ellas estaba la vida de ellos porque todos los servicios del naviacuteo los tomaban ellas tan a pechos que se teniacutea por afrentada la que menos haciacutea que otra sirviendo de marear la vela y gobernar el naviacuteo y sondar de proa y tomar el remo al soldado que no podiacutea bogar y escotar144 el naviacuteo y poniendo por delante a los soldados que no se desanimasen que para los hombres eran los trabajos verdad es que a estas cosas ellas no eran apremiadas ni las haciacutean de obliga-cioacuten ni las obligaba si solamente la caridad Asiacute llegaron a esta ciudad de la Asuncioacuten que aunque ahora estaacute muy feacutertil de bastimentos en-tonces estaba de ellos muy necesitada que fue necesario que las muje-res volviesen de nuevo a sus trabajos haciendo rosas con sus propias manos rosando y carpiendo y sembrando y recogiendo el bastimento sin ayuda de nadie hasta tanto que los soldados guarecieron de sus fla-quezas y comenzaron a sentildeorear la tierra y adquirir indios e indias de su servicio hasta ponerse en el estado en que ahora estaacute la tierra He querido escribir y traer a la memoria de V A para hacerle saber la ingratitud que conmigo se ha usado en esta tierra porque al presente se repartioacute por la mayor parte de los que hay en ella asiacute de los anti-guos como de los modernos sin que de miacute y de mis trabajos se tuviese ninguna memoria y me dejaron de fuera sin me dar indio ni ninguacuten geacutenero de servicio Mucho me quisiera hallar libre para me ir a presen-tar delante de VA con los servicios que a SM he hecho y los agravios que ahora se me hacen mas no estaacute en mi mano porque estoy casada con un caballero de Sevilla que se llama Pedro de Esquivel que por servir a SM ha sido causa que mis trabajos quedasen tan olvidados y se me renovasen de nuevo porque tres veces le saqueacute el cuchillo de la garganta como allaacute VA sabraacute A que suplico mande me sea dado mi repartimiento perpetuo y en gratificacioacuten de mis servicios [en el origi-nal del AHN Diversos doc 141 dice ademaacutes mande que sea proveydo mi marido de alguacuten cargo conforme a la calidad de su persona pues el de su parte por sus servicios lo merece] lo merece Nuestro sentildeor acre-ciente su Real vida y estado por muy largos antildeos De esta ciudad de la Asuncioacuten y de julio 2 1556 antildeosServidora de V A que sus Reales manos besa

Dontildea Isabel Guevara

144 Sacar agua de un riacuteo acequia o presa

166 JUAN FRANCISCO MAURA

Sobremdash A la muy alta y muy poderosa sentildeora Princesa dontildea Joana Gobernadora de los reinos de Espantildea etc ndash En su Consejo de Indias (Isabel de Guevara 619-21)

Iroacutenicamente la carta teniacutea que llegar a manos de la desdichada heredera del trono de Castilla e hija de los Reyes Catoacutelicos Juana laquola Locaraquo que habiacutea muerto el antildeo an-terior Son profeacuteticas las palabras de esta mujer no soacutelo porque sus hechos personales quedasen en el olvido sino porque incluso se ha borrado la historia de las mujeres en el Nuevo Mundo negando su presencia Por lo menos Isabel Guevara tuvo acceso a una pluma iquestCuaacutentas seriacutean las que ni siquiera sabriacutean escribir

Otra contemporaacutenea fue dontildea Leonor de Iciz que vivioacute durante la segunda mitad del siglo XVI Interesa sobre todo por los sonetos que escribioacute en elogio de Ercilla soldado que participoacute en la conquista de Chile y que se inmortalizoacute con su obra La Araucana (Serrano y Sanz 269 534) Lo mismo hizo Dontildea Bernarda Lintildeaacuten en 1610 autora de otro soneto en memoria del capitaacuten Gaspar Peacuterez de Villagraacute que participoacute en la conquista de Nuevo Meacutexico (Serrano y Sanz 270 14) Los escritos de estas mujeres tratan de de dos de las eacutepicas maacutes dramaacuteticas de la conquista

En el Peruacute y en pleno siglo XVII aparece otra fundadora de conventos Sor Bernardina de Jesuacutes que ademaacutes fue comparada con Santa Teresa por la semejanza de sus laquocartasraquo con las de la santa de Avila Fue fundadora del convento de Tacunga en Quito maacutes tarde destruiacutedo por un terremoto Dice Serrano y Sanz con respecto a su biografiacutea un tanto legendaria que fue carmelita descalza de Lima y hermana de Dontildea Mariacutea Benavides y Esquivel abuela de D Pedro de Peralta Barnuevo (Serrano y Sanz 269 553) Dicen que esta santa se alimentoacute durante treinta antildeos con laquochochos y caacutescaras de naranja hecho tan raro como increiacuteble Cuando fallecioacute reparaban las monjas en ponerle una vara de azucenas porque habiacutea sido casada y aquellas flores aparecieron milagrosamente sobre el cadaacuteverraquo (Serrano y Sanz 269 553)

Otra limentildea del primer cuarto del siglo XVII con reputacioacuten de santa fue Dontildea Luisa Melgarejo En este caso no se trata de una religiosa de oficio sino de la mujer del doctor Juan de Soto La uacutenica diferencia es que dontildea Luisa al parecer teniacutea laquovisiones y reve-lacionesraquo lo que debioacute poner nervioso a maacutes de un miembro del tribunal del laquoSanto Oficioraquo que consideraron sus escritos laquoculpadosraquo De su papel de laquosantaraquo pasa por lo tanto al de laquoposesaraquo o laquoendemoniadaraquo El inquisidor de Lima Gaitaacuten escribioacute un infor-me donde a traveacutes de la opinioacuten puacuteblica y de otras averiguaciones se deciacutea que dontildea Luisa Melgarejo laquomujer santaraquo sabiacutea cuando las almas de los difuntos saliacutean del Purga-torio El diacutea 14 de noviembre de 1623 se decidioacute tomar posesioacuten de todos los cuadernos en los que habiacutea escrito las experiencias de todos sus laquoarrobos suspensiones extasis y revelacionesraquo Estos cuadernos una vez recogidos presentaron toda una serie de al-teraciones borrones adiciones enmiendas incluso diferente letra por lo que despueacutes de haber sido examinados resultaron culpables145 Excelente imaginacioacuten debioacute tener dontildea Luisa Melgarejo la suficiente al parecer para convencer a algunos miembros de la iglesia de que en sus escritos laquohabiacutea algoraquo que mereciacutea la pena Estas cosas ocurriacutean en Lima uno de los centros culturales maacutes importantes de la vida social y poliacutetica en la Ameacuterica espantildeola Lima a comienzos del siglo XVII seguacuten el empadronamiento llevado

145 Serrano y Sanz 270 47 Veacutease J T Medina Historia del tribunal del Santo Oficio de la Inquisicioacuten de Lima (1569-1820) (Santiago Imprenta Gutemberg 1887) Tomo II 34-41

167ESPANtildeOLAS DE ULTRAMAR EN LA HISTORIA Y EN LA LITERATURA

a cabo en 1614 por el marqueacutes de Montesclaros era una ciudad de 25000 habitantes de los que 11000 eran espantildeoles El nuacutemero de religiosos y religiosas llegaba a 1720 (Pittaluga 77)

Se sabe que en la Isla de Santo Domingo durante el siglo XVI nacioacute o al menos resi-dioacute una poeta de ceacutelebre apellido en los aconteceres del Nuevo Mundo Dontildea Elvira de Mendoza de la que se conserva un manuscrito en la Real Academia de la Historia laquoCantares miacuteos que estaacuteis rebeladosraquo Eugenio de Salazar hace un elogio de ella como poeta en un Soneto a la ilustre Poeta y Sentildeora Dontildea Elvira de Mendoza moradora en la ciudad de Santo Domingo (Serrano y Sanz 270 53)

Nacida en Burgos sobre el antildeo 1590 dontildea Luisa de Padilla merece un lugar aparte dentro del grupo de mujeres escritoras de su eacutepoca Por su estilo faacutecil y castizo su no-vedad de pensamientos y su rica erudicioacuten recibioacute el siguiente comentario de Manuel Serrano y Sanz laquoPocas figuras hay en nuestra historia literaria femenil que puedan compararse a esta eminente prosista acaso la maacutes notable de cuantas florecieron en Es-pantildea durante el siglo XVIIraquo (Serrano y Sanz 270 95-96) Este comentario y comparacioacuten deberiacutea ampliarse para que tambieacuten incluyese a laquola historia literaria varonilraquo

Dontildea Luisa fue defensora de la labor que la Inquisicioacuten estaba realizando en la laquolim-piezaraquo de mujeres laquosoldados del demonioraquo que existieron en algunas provincias espa-ntildeolas en aquel tiempo Muchas de las mujeres que combinaban la magia con los po-deres curativos fueron condenadas no solamente por hombres de la Inquisicioacuten sino tambieacuten por mujeres de todas las clases sociales como es el caso de Luisa de Padilla condesa de Aranda En su obra Elogios de la verdad e invectiva contra la mentira preveniacutea contra aquellos que practicaban artes en contra de la religioacuten cristiana La magiacutea negra seguacuten Padilla era la causante de que muriesen casi tantas personas como otras causas naturales habieacutendose descubierto hasta seis mil brujas en Vizcaya y Guipuzcua con-fesando una mujer de un pueblo pequentildeo haber matado con su laquomagiaraquo a ochocientas personas (Perry 31) Eran estos laquomales de ojoraquo y maldiciones seguacuten la autora las causas de que se secasen los pechos de las madres lactantes que se separasen las parejas casa-das y que abortasen las embarazadas (Perry 31)

Si se tiene en cuenta que dontildea Luisa estuvo emparentada con la maacutes rancia aristocra-cia de su tiempo o lo que es lo mismo con algunos de aquellos que en cierta manera dirigiacutean los destinos de Espantildea en aquella eacutepoca (Duques de Lerma Duque de Uceda Marqueacutes de Cueacutellar Conde de Santa Gadea Marqueacutes de Belmonte por citar algunos) se comprenderaacute mejor su identificacioacuten con una institucioacuten que en teoriacutea velaba por la salvaguarda de los valores laquoeternosraquo de una Espantildea destinada a ser la campeona del ca-tolicismo durante los siglos XVI y XVII El padre de dontildea Luisa fue don Martiacuten de Padilla y Manrique extraordinario militar que proboacute su valor contra enemigos moriscos ingle-ses holandeses piratas berberiscos y el renegado genoveacutes Muley Faxad Fue veterano de la batalla de Lepanto donde apresoacute a cuatro galeras y acompantildeoacute con su escuadra a la reina Dontildea Margarita de Austria cuando vino de Geacutenova en 1598 laquoHabiacutea obtenido a 24 de julio de 1587 el tiacutetulo de Conde de Santa Gadea y en 1596 el de Capitaacuten General de la Armada del mar Oceacuteanoraquo (Serrano y Sanz 27095-96)

Por otra parte tambieacuten se sabe que dontildea Luisa participoacute directamente y desde tem-prana edad en la praacutectica de algunas actividades intelectuales como la historia y la arqueologiacutea a la vez que dedicaba su tiempo a virtudes cristianas como la caridad y el socorro de los necesitados (Serrano y Sanz 270 97) Resulta mucho maacutes faacutecil compren-

168 JUAN FRANCISCO MAURA

der la postura ideoloacutegica de esta gran mujer si tienen en cuenta ademaacutes de los factores antes mencionados otros tantos de caraacutecter biograacutefico concernientes a su educacioacuten y matrimonio

Otra escritora fue la mexicana dontildea Mariacutea Casilda Pozo natural de Temestla (Meacutexi-co) Nacida en el mes de abril de 1682 dejoacute escrita su biografiacutea en 16 cuadernos el ma-nuscrito original se encuentra en la biblioteca del colegio de San Gregorio de Meacutexico Fue su confesor el jesuiacuteta Domingo Quiroga que fue quieacuten la incitoacute a escribir su obra (Serrano y Sanz 270 137) Sor Juana de San Antonio aparece a principios del siglo XVII formando parte de un grupo de religiosas espantildeolas que fueron a Manila por la ruta de Meacutexico Ademaacutes de distinguirse por sus cualidades personales su obra interesa por ofrecer informacioacuten testimonial y costumbrista acerca de la forma de vestir de chinos y japoneses (Serrano y Sanz 270 225)

Otra monja esta vez ecuatoriana fue Gertrudis de San Ildefonso Nacida en 1652 profesoacute su vocacioacuten en el convento de Santa Cruz de Quito dejando escrita su vida por mandato de su confesor el padre Martiacuten de la Cruz el cual hizo una biografiacutea laquoen tres gruesos voluacutemenesraquo Gertrudis de San Ildefonso murioacute en 1709 (Serrano y Sanz 270 300) en olor de santidad

Sor Mariacutea Ana Agueda de San Ignacio nacioacute el 3 de marzo de 1695 en la dioacutecesis de la puebla de los Angeles en un rancho del lugar de Santiago Tecaliacute (Serrano y Sanz 270300) Esta monja mexicana escribioacute varias obras durante su vida conventual a lo largo de la cual desempentildeoacute el cargo de priora por muchos antildeos Entre sus obras todas de caraacutecter piacuteo y de laquoamor divinoraquo escribioacute un curioso y laquocopiosoraquo tratado de la Leche virginal de la Soberana Madre de Dios El padre Fr Juan de Villa Saacutenchez hace el siguiente comentario al respecto laquoen que hablando primero en sentido natural de los beneficios que debemos a Nuestra Sentildeora pasa a tratar en sentido miacutestico y alegoacuterico enten-diendo en la leche la doctrinaraquo (Serrano y Sanz 270301) Mexicana fue tambieacuten Sor Petronila de San Joseacute que ejercioacute como abadesa del Real monasterio de Jesuacutes Mariacutea de la ciudad de Meacutexico Escribioacute Vidas de varias religiosas ejemplares obra que tiene su im-portancia ya que al parecer laquoDe esta obra se sirvioacute D Carlos de Siguumlenza y Goacutengora para escribir su Parayso Occidental (Meacutexico 1684) seguacuten eacutel mismo declara en el proacutelogo diciendo lsquoa quien si hay algo bueno en esta historia se le debe todorsquoraquo (Serrano y Sanz 270 354) Menos conocida fue su compatriota Sor Luisa de Santa Catalina natural de Xacona laquopueblo situado en las inmediaciones de Zamora (Meacutexico)raquo siendo bautizada en 1682 Escribioacute Cartas espirituales a su confesor el P Juan Loacutepez de Aguado (Serrano y Sanz 270 361-62)146

Todos estos escritos la mayoriacutea de ellos ignorados por el gran puacuteblico tienen la im-portancia de darnos una perspectiva diferente En otras palabras ensentildearnos la maacutes refinada sensibilidad de muchas mujeres que permanecieron y en su mayoriacutea siguen permaneciendo a laquooscurasraquo de una eacutepoca tan rica de la literatura espantildeola como fue el Siglo de Oro Este siglo fue tambieacuten en su dimensioacuten literaria y artiacutestica patrimonio de la mujer

146 Para profundizar en muchas de estas escritoras hispano-americanas la consulta de la Biblioteca Hispano-Americana de Beristain de Souza resulta de capital importancia

169ESPANtildeOLAS DE ULTRAMAR EN LA HISTORIA Y EN LA LITERATURA

Sor Nada ardores divinos de una monja adolescente escritos ineacutedi-tos de una recieacuten profesa del siglo XVI147

iexclQueacute encantadores son tus amores hermana miacutea espo-sa iexclQueacute deliciosos son tus amores maacutes que el vino Y el aroma de tus perfumes es mejor que el de los baacutelsamos Miel virgen destilan tus labios esposa miel y leche hay en tu lengua y el perfume de tus vestidos es como aroma de incienso (Cantar de los Cantares 4 10-11)

Sor Nada llamada asiacute por humildad seguacuten dice el Indice de manuscritos de la Biblio-teca Nacional de Madrid es uno de los ejemplos maacutes desconocidos e interesantes que tenemos de la poesiacutea y prosa amoroso-religiosa del siglo XVII Hasta la fecha nunca se habiacutea publicado su obra e incluso hasta el antildeo 1995 para mi sorpresa no habiacutea copias microfilmadas de sus manuscritos en la Biblioteca Nacional Serrano y Sanz en su libro Apuntes para una Biblioteca de Escritoras Espantildeolas hace una escueta y pasajera mencioacuten de esta mujer y de su obra (68-69) siendo eso todo lo que hasta ahora se sabiacutea de ella Sus escritos consisten en los siguientes manuscritos

1 laquoEn queacute consiste un verdadero amor de Diosraquo 9 hojas uacutetiles en 4ordm letra del siglo XVII Biblioteca Nacional de Espantildea Manuscrito 1295926

2 laquoPintura del Propio Amorraquo laquoPintura del propio Amorraquo 10 hojas uacutetiles en 4ordm letra del siglo XVII Biblioteca Nacional de Espantildea Manuscrito 1295927

3 laquoEsplicacioacuten sobre en queacute consiste la paz del Almaraquo laquoQuartillas aacute un Alma que padece soledad interiorraquo 7 hojas uacutetiles en 4ordm letra del siglo XVII Biblioteca Nacio-nal de Espantildea Manuscrito 1295828

En cuanto a su persona soacutelo se nos dice que laquose encubrioacute con este seudoacutenimo laquoSor Nadaraquo Esta monja desconocida de origen hispanoamericano posee toda la frescura e ingenuidad de una joven apasionada metida por vocacioacuten u obligacioacuten a ejercer la profesioacuten maacutes comuacuten para mujeres de cierta clase social de su tiempo En sus liacuteneas podemos encontrar un misticismo simple incluso en algunos momentos infantil pero a su vez lleno de una fuerza y sensualidad interior poco comuacuten en escritos de este geacute-nero que desborda los liacutemites del laquoamor divinoraquo a traveacutes de los diaacutelogos entre el Alma y el Esposo Sor Nada consigue proyectar su amor a Dios maacutes allaacute de una experiencia romaacutentica Su experiencia es sincera y genuinamente miacutestica trascendiendo la imita-cioacuten o la propia creacioacuten poeacutetica ficcionalizada (Hatzfeld 30) Algunos pasajes son de un

147 Veacutease mi artiacuteculo Sor Nada ardores divinos de una monja adolescente escritos ineacuteditos de una monja profesa del siglo XVIIraquo Espeacuteculo Revista de estudios literarios 26 (2004) 1-10 Universidad Complutense de Madrid http wwwucmesinfoespeculonumero26sornadahtml

170 JUAN FRANCISCO MAURA

alto contenido eroacutetico con sustantivos y metaacuteforas que recuerdan la maacutes iacutentima unioacuten amorosa en unos casos y el tierno amor maternal en otros

[T]e miro Jesus mio desnudo a las inclemencias del tiempo y ardien-do en puro fuego de Amor por la salud de las Almas y me ensentildeas a que te ame con todo mi corason y puresa de espiritu No atendiendo ni buscando umanos intereses ni a solisitar consuelos ni regalos espi-rituales que suelen empantildear la puresa del noble corason No mi Jesus amable pues antes me ensentildeaste tu puro Amor que desnudo sean [sic] de encaminar mis passos desde el pesebre asta la cuna en donde te miro tan desnudo como el pesebre y todo Sentildeor por mi Amor (Mss 12959 26 hoja 1 v)

El manuscrito (12959 27) de la mencionada serie de tres contiene algunas correccio-nes quizaacute hechas por el confesor o quizaacute por ella misma cuando se dirige con excesiva familiaridad y arrebatado fervor a su Amado148 He escogido el manuscrito (12959 Caja 28) en primer lugar por ser el ejemplo maacutes representativo de su poesiacutea y prosa En este manuscrito encontramos de forma maacutes directa que alegoacuterica toda la frescura de un diaacutelogo entre Jesuacutes y el alma que raya como diriacutea Cervantes laquoa la llana y sin rodeosraquo (667 lib 2 cap 38) con el doloroso y a veces desesperado deseo de la entrega y la unioacuten final con el Amado La ortografiacutea no ha sido corregida respetaacutendose el texto ori-ginal149 Veamos el siguiente fragmento

Mira que te amo con Amor de padre y con Amor de esposo el mas fino y puro enamorado que no tan solo me presio de darte mi mano sino tambien todo mi cuerpo y sangre para que con mi pan de vida te sustentes y te regales a tus anchuras y que con mi propio espiritu vivas en paz como tu lo deseas y que mis amores sean unico alivio en tus trabajos en esta mortal vida pues si esto es asi y sabes que muero por darte vida dime esposa mia de que te fatigas Dame querida tus bras-sos y dime si me amas como yo te amo (Hoja 4)

148 La antologiacutea de Promis ha procurado insertar entre los textos antoloacutegicos algunos que se refieren a la es-critura de mujeres fundamentalmente de aquellos generados en el interior de los espacios conventuales Estos textos se fundan como laquohistorias de vidasraquo y responden casi siempre a los requerimientos de los confesores de las monjas coloniales En este sentido resulta valiosiacutesima la incorporacioacuten de la llamada Relacioacuten autobiograacute-fica de Sor Ursula Suaacuterez como una muestra significativa de la escritura monjil entendida en esta eacutepoca (como tambieacuten en la tradicioacuten europea medieval) inserta en las denominadas laquolabores de manoraquo de las religiosas ya que el texto escrito por mandato se convertiacutea en una suerte de entramado o tejido linguumliacutestico es decir en un nuevo bordado que la mayor parte de las veces el confesor convertido en censor iba haciendo tachando y enmendando En la antologiacutea Promis agrega un texto de Sor Tadea Garciacutea de la Huerta titulado Relacioacuten de la inundacioacuten que hizo el riacuteo Mapocho de la ciudad de Santiago de Chile en el monasterio de Carmelitas titular de San Rafael el diacutea 16 de junio de 1783 se trata de un poema tipo romance escrito en versos octosilaacutebicos y que da cuenta de lo sucedido ese diacutea en el convento (Resentildea de la literatura del reino de Chile de Joseacute Promis Eddie Morales Pintildea httpwwwupaclpublicaciones2002literatura_promishtm)

149 Son frecuentes las faltas ortograacuteficas Una de ellas es el uso constante del seseo La ausencia de acentua-cioacuten y puntuacioacuten exceptuando alguacuten punto o coma arbitrario no seguido casi nunca de mayuacutescula inicial lo mismo que el uso igualmente aribitrario de la h o de b v r q g j m n x etc No olvidemos de la misma forma la laxitud linguumliacutestica existente en el siglo XVII (no sabemos a queacute parte de eacuteste pertenece el manuscrito) asiacute como la joven edad de la monja

171ESPANtildeOLAS DE ULTRAMAR EN LA HISTORIA Y EN LA LITERATURA

Los versos del presente manuscrito poseen la misma fuerza que tiene su prosa Con una estructura estroacutefica indefinida estaacuten aparentemente corregidos por alguien que tu-vo la oportunidad de conocer personalmente a la autora Muy probablemente se trate del padre al que hace referencia al principio del primer manuscrito laquoMandame el Pd que le declare en que consiste un verdadero amor a Diosraquo a continuacioacuten continuacutea con su caracteriacutestica humildad laquo[O]bedesere y dire lo q Dios me inspire segun mi rudesa y simplisidadraquo (Mss 12959 26) En cuanto a la fuerza pasional de esta joven observamos con cierta tristeza coacutemo aparece sublimada en sus escritos con toda la enegiacutea de una joven mujer llena de intensidad y vida pero encerrada en los liacutemites de un convento Veamos un ejemplo en donde responde el Alma en los siguientes versos

O mi enamorado Jesus O mi dulse y tierno amanteO alegria de los sielos O dulse Jesus amable

(Toda Sentildeor me derrito toda Sentildeor me desagoy quiero vivir por ti ea sentildeor abrasadme) [Tachado en el original]

Toda Sentildeor me derrito toda Sentildeor me desagoy quiero morir por vos ea Sentildeor que ya acabo

Ya tus amores me llaman ya tus perfumes me traencon suspiros y agonias Sentildeor hasta que te alcanse

O mi Jesus amoroso no puedo mas dilatarmeya la pasiensia me falta dulse Jesus abrasadme

(No puedo vivir sin vos no puedo mas dilatarmeya la pasiensia me falta dulse) [Tachado en el original]

No puedo vivir sin vos mi dulse Jesus amablepues me teneis echisada siendo mi esposo y mi Padre

Ay que me abraso Ay que me quemo del Amor deJesus nasareno como no tocan y tantildeen a fuego150

Estos versos llenos de arrebato sublimado conectan con toda la tradicioacuten miacutestica es-pantildeola que se remonta a Ramoacuten Llul y que culmina en el maacutes universal de nuestros

150 En toda la fuerza y simbologiacutea del amor maacutes iacutentimo del maacutes alto y sublime placer de la unioacuten de los amantes tal como lo encontramos en el Cantar de los Cantares y en San Juan de la Cruz Leemos en la Biblia

Ya me he quitado la tuacutenica iquestCoacutemo volver a vestirme Ya me he lavado los pies iquestCoacutemo volver a ensuciarlosMi amado metioacute su mano por el agujero (de la llave) y mis entrantildeas se estremecieron por eacutel Me levanteacute para abrir a mi amado Mis manos destilaron mirra y mis dedos mirra exquisita en el pestillo de la cerradura (5 3-5)

Nos ocurre lo mismo con San Juan de la Cruz en su insuperable poema laquoLlama de amor vivaraquo

iexclOh cauterio suaveiexclOh regalada llagaiexclOh mano blanda iexclOh toque delicadoque a vida eterna sabey toda deuda pagaMatando muerte en vida la has trocado

172 JUAN FRANCISCO MAURA

miacutesticos San Juan de la Cruz Esta tradicioacuten se extiende hasta finales del siglo XVII esto es hasta los finales del Barroco siendo un poco maacutes tardiacuteo en la Ameacuterica espantildeola Sin tener como propoacutesito discutir en el presente trabajo a queacute corriente miacutestica pertenece la obra de Sor Nada es necesario resaltar no obstante el hecho de que estaacute escrito por una mujer y ademaacutes de tierna edad El manuscrito 12959 Caja 26 termina con estas pa-labras laquo[T]odas estas boverias escrivi por entretenimiento siendo resien profesa en la religion Sor Nadaraquo Mas no por la juventud de su autora los escritos dejan de tener lo-gradas metaacuteforas imaacutegenes y siacutembolos sacados de la naturaleza La alegoriacutea de la unioacuten matrimonial poseeacute el fuego liacuterico de la maacutes apasionada de las relaciones amorosas vivi-ficada por perfumes flores insectos animales escarchas nieves o abrojos Por lo tanto aunque la narracioacuten destile cierta ingenuidad no carece por ello de un vocabulario rico con el sabor popular de la poesiacutea de los cancioneros y romances de tradicioacuten renacen-tista No ha sido otra mi intencioacuten que la de rescatar del olvido unos escritos en prosa y en verso llenos de frescura y espontaneidad que nos muestran la pasioacuten con que la joven novicia se laquoentrega en cuerpo y almaraquo a los menesteres de su profesioacuten guiada por un padre espiritual en esos primeros antildeos de formacioacuten Esta ha sido la razoacuten por la que presento a continuacioacuten el citado manuscrito en su totalidad

Sor Nada (Mss 1295928)

laquoEsplicacion sobre en que consiste la paz del AlmaraquolaquoQuartillas a un Alma que padece soledad interiorraquo

[7 hojas utiles en 4ordm letra del siglo XVII]

+

Esplicacion sobre en que consiste la paz del Alma

Pareseme segun mi rudo entender que la verdadera paz del Alma con-siste en una muy pura y buena consiencia en un corason liso y bien intensionado en una verdadera rectitud de espiritu en el qual el Alma procura bolar a Dios sin jamas detenerse a respetos umanos ni reparar en que me diran ni de que me censuraran sino me apresuro a seguir a unos entenderes y pareseres dorados en los quales pretende el mundo engantildear y ensuciar si se puede la puresa de un corason unicamente de Dios y de su Santa ley y se lo conserva cristalino con la divina asis-tencia de la gracia y comprendido de su Amor y temor siguiendo la luz divina de tan amante Sentildeor Dios y ombre verdadero con que este ilustrado corason ni se altera ni se mueve por los disfrasses dorados que ase el mundo y sus moradores mayormente con falssas amistades aunque con ellos muestre buena intension Con la misma grasia y luz de Dios conose el buen corason estos disfrasses que le ase el mundo y se retira de todo con espiritu y valor esto sin la menor alterasion sino que en suma paz se retira a buscar a Dios dentro de su mismo corason

173ESPANtildeOLAS DE ULTRAMAR EN LA HISTORIA Y EN LA LITERATURA

y se abrasa con su pura verdad en la qual se le descubren mil interio-res secretos tan solidos puros y verdaderos que la misma Alma queda abismada y de puro grandes no los puede bien comprender ni esplicar pero estos mismos secretos divinos le sirven de espuelas para no solo correr sino bolar con pies de plumas en seguimiento de su bien ama-do Jesus y como este soberano Sentildeor es tan amante de sus espossas las Almas luego que la ve bolar con pies de plumas la sale al encuen-tro en despoblado campo que se deve de llamar Campo de Amor de Dios y el mismo Sentildeor se viene a las manos por ser Dios que nos ama con Amor infinito de Padre benigno y amoroso con que asiendose en contra deso este divino enamorado en lo interyor de el Alma que le busca con ansias de servirle y amarle y en aquella soledad traban una conversasion amorosa y sensilla como la pluma simple de quien esto escrive

Divino enquentroDios y el Alma en la soledad

O Soberano Principe de la paz dise el Alma tus perfumes me traen a ti bolando porque alla en el mundo y sus valedores me pretendian engantildear y entretenerme con pegaminossas amistades que facilmen-te me pudieran envenenar y matarme apartandome de ti Mi dulse Jesus amable mi Redentor Soberano que con tantas ansias me sales al enquentro como siervo [ciervo] erido de mis Amores los quales tu Amor me ofrese para que con tu mismo Amor te ame y te sirva en paz sin perturbarme ni contristarme ni cansarme de padeser pasando si se ofrese por escarchas nieves espinas ni abrojos ni por otros diverssos trabajos ni piedras de contradision que tu me puedes permitir pues por mas que el mar se levante con sus ferosses olas contra mi ni piedras se me tiren al rostro en todo Sentildeor me quieres con serenidad pasifica sin la menor perturbasion Todo Sentildeor quieres que lo tome con Serenidad de espiritu y asi vengo a ti bolando para que mejor me ensentildees a vivir segun las leyes de tu noble condision que me son muy agradables por mas que el mundo me las despresie por segir sus vanidades y torsidas intensiones con apariensias de bien y con este engantildeo y bien me quie-ro mas a mi que no a mi proximo veo que segun mi pareser se pierden muchas Almas y tambien de aquellos que se depresian y pasan por muy espirituales Con que me paresen pocos los que llegan a padeser con desnudes151 de espiritu por tu purisimo Amor y me parese essas se quedan muy atrasadas en la virtud por el peligro de bolver muy atras el paso de modo que se pueden despentildear y pereser en su misma desgra-sia ya por soberbia o por otras enfermedades que se les pega al corason y asi lo pasan como siegos ignorantes sin advertir en sus peligros

151 La letra en cursiva es miacutea

174 JUAN FRANCISCO MAURA

este aquerdo Sentildeor y otros que tu verdad me ensentildea me ase venir uyendo de las paredes del mundo y me vengo a ti Dios mio bolando con las dos Alas del Amor y temor que tu mismo Amor me ofrese tan de gracia y tan de grado que no se duentildeo mio con que lo responder a tan soberano beneficio y finesa de tus entrantildeas de Amorvengo Sentildeor y esposo mio unicamente a descansar en ti pues los peli-gros del camino me an puesto en mucho sobresalto temiendo el per-derte y sin ti perderme para siempre por una eternidad sin fin pues deseo amado mio ganarme ganandote a ti y vivir en ti aora en vida y despues eternamente y estos cuidados me traen fatigada molida y cansada y no podre tener alivio y descanso sino viendome entre tus brassos aunque sea estando en cruz pues ese es el fin de mis deseos vivir y morir en ti ablame mi cordero manso y ensentildeame a que ver-daderamente te ame como fiel esposa ea mi caro amigo dame la ma-no pues sabes Amor mio que en mi no ay mano sin tu misma mano y asi mi Dios y Sentildeor mi Principe Soberano con umilde rendimiento y deseos de alcansarte te suplico me des la mano y me consueles en estos mis trabajos Deseo Sentildeor vivir en paz y los malos amores de mi Naturaleza flaca no me dejan detentar y no quieren por mi desgrasia atropellar con las leyes de tu Amor ni quisiera perturbar mi corason quando me veo con un torvellino de olas y contratiempos que a menu-do me suelen sercar pero si tu Sentildeor me das la mano nada temo sino que me aseguro y vivire en paz sin que me fatiguen los contratiempos pues mi mano en la tuya y mi espiritu en el tuyo por mas borrascas que me envistan no seran bastantes para rendir mi voluntad a la suya bien si para pronunsiar un fiat que resuene bien atras en tus oidos y que en medio de mis fatigas me ponga a cantar tus divinas misericor-dias hea Sentildeor ya pretendo serrar mis labios por no desir mas bove-rias y deseo Sentildeor oir tus palabras de vida eterna abla Sentildeor que tu sierva oye con atension y cuydado mira mi Dios que se me ase tarde y espero con prisa deseando saborearme y aprovecharme de los ecos de tu Santa dotrina pues todas tus palabras saben a eterna vida callen pues mis sentidos y potensias y todo se ponga en paz pues mi dulse y soberano Sentildeor no se escusara de ablar me aun que en mudo silensio hea mi gran Prinsipe de la paz ablame que tus puros amores me traen perdida por estos asperos montes y mis cortos pasos no te pueden dar alcanse mirame mi Dios a tus pies postrada como un vil gusano y me-nor ormiga de la tierraabla Jesus y dise a su esposa el Alma querida esposa mia que me pides y por que te muestras tan fatigada y mal sufrida no vives como corde-rita del campo buscando de mis pechos el sustancial pasto mi Amor no te sustenta y mi grasia te promete eterna vida pues dime amada de que te fatigas y te muestras mal sufrida mira que te amo con Amor de padre y con Amor de esposo el mas fino y puro enamorado que no tan solo me presio de darte mi mano sino tambien todo mi cuerpo y

175ESPANtildeOLAS DE ULTRAMAR EN LA HISTORIA Y EN LA LITERATURA

sangre para que con mi pan de vida te sustentes y te regales a tus an-churas y que con mi propio espiritu vivas en paz como tu lo deseas y que mis amores sean unico alivio en tus trabajos en esta mortal vida pues si esto es asi y sabes que muero por darte vida dime esposa mia de que te fatigas Dame querida tus brassos y dime si me amas como yo te amoResponde el Alma152 Tu mi Dios sabes si yo te amo pues de mi solo se que mis deseos y ansias buelan a ti mas no alcanso a saber si te amo como tu de-seas ser amado y como desconfio tanto de mi y de mis prosederes falssos temo Dios mio perderme y perderte y asi Sentildeor pues no desechas mis Amores y te muestras tan fino en amarme te pido me ensentildees a vivir segun las leyes de tu pura verdad y fina condisionhija mia dise Dios la prueva de un verdadero Amor consiste en sufrir callar y padeser por mi unico Amor y en todo seguir mis pasos sin ja-mas retroseder por mas fragoso que se muestre el camino pues nunca seran tantas las espinas las escarchas ni las nieves ni los vientos bo-rrascosos que te se ofrescan pasar por mi Amor como los que mi tierno y desinteresado Amor paso por ti y siempre con mis pies descalssos y asi hija y esposa mia muestrate costante en seguir lo perfecto de mis passos pues mi braso fuerte sera en ti y peleara por ti y te sera el todo en tus nesesidades y mi Amor te convertira en dulse y suave lo amargo y molesto a la condision de la carrne

Responde el Alma

O mi enamorado Jesus O mi dulse y tierno amanteO alegria de los sielos O dulse Jesus amable

(Toda Sentildeor me derrito toda Sentildeor me desagoy quiero vivir por ti ea sentildeor abrasadme) [Tachado en el original]

Toda Sentildeor me derrito toda Sentildeor me desagoy quiero morir por vos ea Sentildeor que ya acabo

Ya tus amores me llaman ya tus perfumes me traencon suspiros y agonias Sentildeor asta que te alcanse

O mi Jesus amoroso no puedo mas dilatarmeya la pasiensia me falta dulse Jesus abrasadme

(No puedo vivir sin vos no puedo mas dilatarmeya la pasiensia me falta dulse) [Tachado en el original]

No puedo vivir sin vos mi dulse Jesus amablepues me teneis echisada siendo mi esposo y mi Padre

152 La aparicioacuten de una mayuacutescula al principio de una oracioacuten es algo totalmente arbitrario en este ma-nuscrito dada la libertad ortograacutefica de la autora Como se puede observar en la mayor parte de las veces no es el caso

176 JUAN FRANCISCO MAURA

Ay que me abraso Ay que me quemo del Amor deJesus nasareno como no tocan y tantildeen a fuego

Responde Jesus Hija mia tus simples vozes oygo y aunque resuenan bien a mis oidos pero te deseo mas mansa y pasifica en tus fervores ya sabes que no siempre as de vivir en mantillas ni a los pechos de tu Madre por que es rason que padescas con espiritu fuerte como mu-jer valerosa por que a una esposa del Rey soberano y prinsipe de la paz no le estan bien chiquerias ni fervores de nintildea malcriada y ya es ora que la destete su Madre la Naturaleza y que empesando su nueva vida camine con el favor de mi grasia sigiendo mis passos de eterna vida esto con sus pies descalssos segun mis leyes de Amor puro y desinteresado lo tienen ordenado153 y vivir en paz como lo deje en-cargado a mis apostoles Santos repitiendoles varias vezes Vivir en pas y caridad esto es un vivir en Dios y Dios en el Alma y asi hija mia el Alma que vive en paz vive en mi Como mis cortesanos en el cielo y pues me pides que te ensentildee a vivir segun las leyes de mi condision Repito el desir que te debes mostrar sufrida en todo tiempo y estado sin permitir en tu corason que ni aun los fervores se adelanten con estremos ni ademanes sino atiende y aprende de mi purisima Madre pues siempre la veras si bien lo consideras que mientras vivio en el mundo en todos sus trabajos se mostro firme fuerte costante como piedra diamante Pues mirandome nintildeo entre sus brasos desnudo en el pesebre desnudo y crusificado en los brassos de una cruz En estos y otros passos no se mudo su rostro sino que en suma serenidad y pasifico corason toda se sacrificaba enteramente en los brassos de mi Amor y rendido su corason y voluntad en la de mi eterno Padre por ejemplo te la doy y deseo que aprendas de sus nobles calidades pues te aseguro carisima que las leyes de mi condision y pura verdad todo lo allaras enserrado en el corason de mi purisima Madre sedle fiel y descansaras en paz

+

Quartillas a un alma que padese soledad interior

1Un Alma afligida y tristese ve en un campo desiertay en el su esposo la tieneAtormentada y sedienta

153 Es a traveacutes de estas liacuteneas lo que hace suponer que la autora de este diaacutelogo amoroso entre el Alma y Je-suacutes es novicia esto es laquoque estaacute empesando su nueva vidaraquo En las mismas liacuteneas una vez maacutes se hace alusioacuten al laquodesteteraquo de su vida civil laquoa una esposa del Rey soberano y principe de la paz no le estan bien chiquerias ni fervores de nintildea malcriada y ya es ora que la destete su Madre la naturalesaraquo (fol 5)

177ESPANtildeOLAS DE ULTRAMAR EN LA HISTORIA Y EN LA LITERATURA

2Pendiente se ve en el AyreSolo un hilo la sustentasin tocar el pie en el sueloporque del no tome tierra

3Mirandola esta yto a ytoaquel sol que la atraviesay la enviste con sus rayosmas ella no pestantildeea

4Como sigarra padese y como a tal se atormentabatiendo sus mismas Alasy el corason se atraviesa

5Con penas sustos temoresquando se mira assi mesmasin tener valor en nadaporque es la misma flaquesa

6Pero el Amor de su esposotoda su atension le llevay la pone en un abismopero cubierto en tiniebla

7Desea dar algun bueloy subir con ligeresapero se mira travadacon una fuerte cadena

8Clama suspira y padeseMas del todo se sujetaRindiendo su voluntadA la divina clemencia

9Los enemigos del AlmaCruelmente le asen guerray ella aunque firme y constantelos reselos la atormentan

178 JUAN FRANCISCO MAURA

10de todos modos padeseaunque gosa la asistensiadel divino esposo amadoque en su interior se recrea

11Solo de verla penary con verla tan serenadise resibe mil gustosde su sigarra pequentildea

12Le sabe el mundo a mil yelesy su trato le atormentaviendo en el mil falsedadesque todas saben a tierra

13Para poderse librardeja de correr y buelacon las Alas del Amory el mismo Amor se la lleva

Una vida dedicada a un amor divino un amor que le haraacute llenar un buen nuacutemero de cuartillas dedicadas a tan alta empresa Se desconoce si la vocacioacuten de Sor Nada con-tinuoacute con tanta intensidad el resto de sus diacuteas Ciertamente la vida en el covento no era faacutecil En algunos casos la experiencia era traumaacutetica incluso fatal para algunas de las adolescentes de la Ameacuterica Espantildeola Las reglas del claustro eran severas por varias razones Estas joacutevenes si no teniacutean el permiso de la superiora no podiacutean recibir visitas no podiacutean volver a sus casas su correspondencia era censuraba y no podiacutean salir del periacutemetro conventual Igualmente se levantaban antes del amanecer para oir misa tra-bajaban el resto del diacutea y lo maacutes interesante es que muchas veces esta vida era aceptada por muchas

Page 33: Tercera parte: Mujeres en la vida intelectual - …parnaseo.uv.es/Editorial/Maura/TerceraParte.pdf · La Biblia, por su parte, hace repetidas menciones de la mujer y sobre el comporta-

163ESPANtildeOLAS DE ULTRAMAR EN LA HISTORIA Y EN LA LITERATURA

pudieron transcender como unas de las maacutes bellas manifestaciones literarias que hoy en diacutea se conservan Fue su agudeza mental sensibilidad y cultura tal que no fueron suficientes los soacutelidos muros del convento para contener el genio de tan extraordinaria mujer Recordemos sus conocidiacutesimos versos en defensa de las mujeres

Hombres necios que acusaacuteisa la mujer sin razoacutensin ver que sois la ocasioacutende lo mismo que culpaacuteis142

Las metaacuteforas y la delicadeza que emplea en rebatir a su obispo en su laquoRespuesta a sor Filotea de la Cruzraquo no son solamente el epiacutetome del feminismo de su tiempo sino una de las maacutes brillantes manifestaciones del barroco hispano Poesiacutea teatro ensayo y un conocimiento extraordinario de las ciencias claacutesicas de su tiempo hacen de esta mujer un ejemplo extraordinario de las letras universales Ya son cientos los artiacuteculos y libros que se han escrito sobre Sor Juana y no dejan de aparecer tesis doctorales sobre los maacutes diversos temas conectados con la citada autora143 Como nos dice Stephanie Merrim en su documentada obra Early Modern Womenrsquos Writing and Sor Juana Ineacutes de la Cruz

She wrote and published on secular themes as atypical for a nun as human love Her remarkably extensive writings essayed and reenacted most of the (male) poetic dramatic theological and even philosophi-cal discourses of her times in the metropolis making her works a com-pendium of baroque culture in its diversity and syncretism Sor Juana self-creation as a learned women effectively toppled many of the walls in which she was materially enclosed and positioned her within the dynamic world of early modern European culture (xii)

No se debe dejar de mencionar a otras escritoras novohispanas de la eacutepoca que aun-que no fueron tan proliacuteficas y relevantes como Juana Ineacutes de la Cruz dejaron testimo-nio de algunos acontecimientos que tienen intereacutes socioloacutegico o testimonial Este es el caso de Dontildea Mariacutea Estrada Medinilla de igual nombre y apellido que la mujer que acompantildeoacute a las tropas de Corteacutes en su primera entrada a Meacutexico Natural de Meacutexico publicoacute toda su obra a mediados del siglo XVII concentraacutendose principalmente en la lle-gada del Marqueacutes de Villena virrey y capitaacuten general de la Nueva Espantildea a la ciudad de Meacutexico en el antildeo 1640 Escrita en octavas reales la obra trata de las fiestas de toros y cantildeas con que se obsequioacute al citado virrey Fue impresa en Meacutexico en 1641 (Serrano y Sanz 269 402)

Mucho maacutes importante para el presente libro es Dontildea Isabel de Guevara que escribioacute en 1556 la carta en que se expone la ayuda que ofrecieron las mujeres en el descubri-miento y conquista del Riacuteo de la Plata No cabe la menor duda de que esta carta es uno

142 Para una mejor comprensioacuten del caraacutecter de esta excepcional mujer veacutease entre los numeros trabajos publicados Fredo Arias de la Canal Intento de psicoanaacutelisis de Juana Ineacutes y otros ensayos sorjuanistas (Meacutexico Frente de Afirmacioacuten Hispanista 1972) 47

143 Veacuteanse entre otros trabajos Octavio Paz Sor Juana Ineacutes de la Cruz o las trampas de la fe Georgina Sabat de Rivers En busca de Sor Juana Margo Glantz Sor Juana la comparacioacuten y la hipeacuterbole Gerard C Flynn Sor Juana Ineacutes de la Cruz Stephanie Merrim Feminist perspectives on Sor Juana Ineacutes de la Cruz Pamela Kirk Sor Juana Ineacutes de la Cruz religion art and feminism

164 JUAN FRANCISCO MAURA

de los documentos maacutes importantes con que contamos en relacioacuten a la aportacioacuten fe-menina en el proceso de la conquista de Ameacuterica Su importancia viene dada por varios factores Primero es uno de los primeros testimonios mdashsi no el primeromdash en donde se expone abiertamente la indispensable colaboracioacuten de las mujeres en el descubrimien-to y conquista de tierras en el Nuevo Mundo laquoQue si no fuera por ellas todos fueran acabadosraquo En segundo lugar la informacioacuten vertida en estas liacuteneas presenta en parte la manera de pensar de una mujer espantildeola en tales circunstancias Extraordinario tes-timonio de primera mano que nos da una idea de lo que significoacute en muchos casos el valor y entrega constantes de muchas de estas mujeres que auacuten a riesgo de perder sus vidas no dudaron en luchar al lado de los hombres por una causa que consideraban laquocomuacutenraquo

La relevancia histoacuterica de dicha carta hace que merezca ser transcrita en su totali-dad

Carta de dontildea Isabel de Guevara a la princesa gobernadora dontildea Juana exponiendo los trabajos hechos en el descubrimiento y conquista del Riacuteo de la Plata por las mujeres para ayudar a los hombres y pidiendo repartimiento

para su marido Asuncioacuten 2 de julio de 1556

Muy alta y muy poderosa sentildeora

A esta provincia del Riacuteo de la Plata con el primer gobernador de ella don Pedro de Mendoza hemos venido ciertas mujeres entre las cuales ha querido mi ventura que fuese yo la una y como la armada llegase al puerto de Buenos Aires con mil quinientos hombres y les faltase el bastimento fue tamantildea el hambre que a cabo de tres meses murie-ran los mil esta hambre fue tamantildea que ni la de Jerusalem se le puede igualar ni con otra ninguna se puede comparar Vinieron los hombres en tanta flaqueza que todos los trabajos cargaban de las pobres mu-jeres asiacute en lavarles las ropas como en curarles hacerles de comer lo poco que teniacutean limpiarlos hacer centinela rondar los fuegos armar las ballestas cuando algunas veces los indios les veniacutean a dar guerra hasta cometer a poner fuego en los versos y a levantar los soldados los que estaban para ello dar arma por el campo a voces sargentean-do y poniendo en orden los soldados porque en este tiempo como las mujeres nos sustentamos con poca comida no habiacuteamos caiacutedo en tanta flaqueza como los hombres Bien creeraacute V A que fue tanta la so-licitud que tuvieron que si no fuera por ellas todos fueran acabados y si no fuera por la honra de los hombres muchas maacutes cosas escribiera con verdad y los diera a ellos por testigos Esta relacioacuten bien creo que la escribiraacuten a V A maacutes largamente y por eso cesareacute Pasada esta tan peligrosa turbunada determinaron subir el riacuteo arriba asiacute flacos como estaban y en entrada de invierno en dos bergantines los pocos que quedaron vivos y las fatigadas mujeres los curaban y los miraban y les guisaban la comida trayendo la lentildea a cuestas fuera del naviacuteo y animaacutendolos con palabras varoniles que no se dejasen morir que presto dariacutean en tierra de comida metieacutendolos a cuestas en los

165ESPANtildeOLAS DE ULTRAMAR EN LA HISTORIA Y EN LA LITERATURA

bergantines con tanto amor como si fueran sus propios hijos Y como llegamos a una generacioacuten de indios que se llaman tinbues sentildeores de mucho pescado de nuevo los serviacuteamos en buscarles diversos modos de guisados porque no les diese en rostro el pescado a causa de que lo comiacutean sin pan y estaban muy flacos Despueacutes determinaron subir el Paranaacute arriba en demanda de bastimento en el cual viaje pasaron tanto trabajo las desdichadas mujeres milagrosamente quiso Dios que viviesen por ver que en ellas estaba la vida de ellos porque todos los servicios del naviacuteo los tomaban ellas tan a pechos que se teniacutea por afrentada la que menos haciacutea que otra sirviendo de marear la vela y gobernar el naviacuteo y sondar de proa y tomar el remo al soldado que no podiacutea bogar y escotar144 el naviacuteo y poniendo por delante a los soldados que no se desanimasen que para los hombres eran los trabajos verdad es que a estas cosas ellas no eran apremiadas ni las haciacutean de obliga-cioacuten ni las obligaba si solamente la caridad Asiacute llegaron a esta ciudad de la Asuncioacuten que aunque ahora estaacute muy feacutertil de bastimentos en-tonces estaba de ellos muy necesitada que fue necesario que las muje-res volviesen de nuevo a sus trabajos haciendo rosas con sus propias manos rosando y carpiendo y sembrando y recogiendo el bastimento sin ayuda de nadie hasta tanto que los soldados guarecieron de sus fla-quezas y comenzaron a sentildeorear la tierra y adquirir indios e indias de su servicio hasta ponerse en el estado en que ahora estaacute la tierra He querido escribir y traer a la memoria de V A para hacerle saber la ingratitud que conmigo se ha usado en esta tierra porque al presente se repartioacute por la mayor parte de los que hay en ella asiacute de los anti-guos como de los modernos sin que de miacute y de mis trabajos se tuviese ninguna memoria y me dejaron de fuera sin me dar indio ni ninguacuten geacutenero de servicio Mucho me quisiera hallar libre para me ir a presen-tar delante de VA con los servicios que a SM he hecho y los agravios que ahora se me hacen mas no estaacute en mi mano porque estoy casada con un caballero de Sevilla que se llama Pedro de Esquivel que por servir a SM ha sido causa que mis trabajos quedasen tan olvidados y se me renovasen de nuevo porque tres veces le saqueacute el cuchillo de la garganta como allaacute VA sabraacute A que suplico mande me sea dado mi repartimiento perpetuo y en gratificacioacuten de mis servicios [en el origi-nal del AHN Diversos doc 141 dice ademaacutes mande que sea proveydo mi marido de alguacuten cargo conforme a la calidad de su persona pues el de su parte por sus servicios lo merece] lo merece Nuestro sentildeor acre-ciente su Real vida y estado por muy largos antildeos De esta ciudad de la Asuncioacuten y de julio 2 1556 antildeosServidora de V A que sus Reales manos besa

Dontildea Isabel Guevara

144 Sacar agua de un riacuteo acequia o presa

166 JUAN FRANCISCO MAURA

Sobremdash A la muy alta y muy poderosa sentildeora Princesa dontildea Joana Gobernadora de los reinos de Espantildea etc ndash En su Consejo de Indias (Isabel de Guevara 619-21)

Iroacutenicamente la carta teniacutea que llegar a manos de la desdichada heredera del trono de Castilla e hija de los Reyes Catoacutelicos Juana laquola Locaraquo que habiacutea muerto el antildeo an-terior Son profeacuteticas las palabras de esta mujer no soacutelo porque sus hechos personales quedasen en el olvido sino porque incluso se ha borrado la historia de las mujeres en el Nuevo Mundo negando su presencia Por lo menos Isabel Guevara tuvo acceso a una pluma iquestCuaacutentas seriacutean las que ni siquiera sabriacutean escribir

Otra contemporaacutenea fue dontildea Leonor de Iciz que vivioacute durante la segunda mitad del siglo XVI Interesa sobre todo por los sonetos que escribioacute en elogio de Ercilla soldado que participoacute en la conquista de Chile y que se inmortalizoacute con su obra La Araucana (Serrano y Sanz 269 534) Lo mismo hizo Dontildea Bernarda Lintildeaacuten en 1610 autora de otro soneto en memoria del capitaacuten Gaspar Peacuterez de Villagraacute que participoacute en la conquista de Nuevo Meacutexico (Serrano y Sanz 270 14) Los escritos de estas mujeres tratan de de dos de las eacutepicas maacutes dramaacuteticas de la conquista

En el Peruacute y en pleno siglo XVII aparece otra fundadora de conventos Sor Bernardina de Jesuacutes que ademaacutes fue comparada con Santa Teresa por la semejanza de sus laquocartasraquo con las de la santa de Avila Fue fundadora del convento de Tacunga en Quito maacutes tarde destruiacutedo por un terremoto Dice Serrano y Sanz con respecto a su biografiacutea un tanto legendaria que fue carmelita descalza de Lima y hermana de Dontildea Mariacutea Benavides y Esquivel abuela de D Pedro de Peralta Barnuevo (Serrano y Sanz 269 553) Dicen que esta santa se alimentoacute durante treinta antildeos con laquochochos y caacutescaras de naranja hecho tan raro como increiacuteble Cuando fallecioacute reparaban las monjas en ponerle una vara de azucenas porque habiacutea sido casada y aquellas flores aparecieron milagrosamente sobre el cadaacuteverraquo (Serrano y Sanz 269 553)

Otra limentildea del primer cuarto del siglo XVII con reputacioacuten de santa fue Dontildea Luisa Melgarejo En este caso no se trata de una religiosa de oficio sino de la mujer del doctor Juan de Soto La uacutenica diferencia es que dontildea Luisa al parecer teniacutea laquovisiones y reve-lacionesraquo lo que debioacute poner nervioso a maacutes de un miembro del tribunal del laquoSanto Oficioraquo que consideraron sus escritos laquoculpadosraquo De su papel de laquosantaraquo pasa por lo tanto al de laquoposesaraquo o laquoendemoniadaraquo El inquisidor de Lima Gaitaacuten escribioacute un infor-me donde a traveacutes de la opinioacuten puacuteblica y de otras averiguaciones se deciacutea que dontildea Luisa Melgarejo laquomujer santaraquo sabiacutea cuando las almas de los difuntos saliacutean del Purga-torio El diacutea 14 de noviembre de 1623 se decidioacute tomar posesioacuten de todos los cuadernos en los que habiacutea escrito las experiencias de todos sus laquoarrobos suspensiones extasis y revelacionesraquo Estos cuadernos una vez recogidos presentaron toda una serie de al-teraciones borrones adiciones enmiendas incluso diferente letra por lo que despueacutes de haber sido examinados resultaron culpables145 Excelente imaginacioacuten debioacute tener dontildea Luisa Melgarejo la suficiente al parecer para convencer a algunos miembros de la iglesia de que en sus escritos laquohabiacutea algoraquo que mereciacutea la pena Estas cosas ocurriacutean en Lima uno de los centros culturales maacutes importantes de la vida social y poliacutetica en la Ameacuterica espantildeola Lima a comienzos del siglo XVII seguacuten el empadronamiento llevado

145 Serrano y Sanz 270 47 Veacutease J T Medina Historia del tribunal del Santo Oficio de la Inquisicioacuten de Lima (1569-1820) (Santiago Imprenta Gutemberg 1887) Tomo II 34-41

167ESPANtildeOLAS DE ULTRAMAR EN LA HISTORIA Y EN LA LITERATURA

a cabo en 1614 por el marqueacutes de Montesclaros era una ciudad de 25000 habitantes de los que 11000 eran espantildeoles El nuacutemero de religiosos y religiosas llegaba a 1720 (Pittaluga 77)

Se sabe que en la Isla de Santo Domingo durante el siglo XVI nacioacute o al menos resi-dioacute una poeta de ceacutelebre apellido en los aconteceres del Nuevo Mundo Dontildea Elvira de Mendoza de la que se conserva un manuscrito en la Real Academia de la Historia laquoCantares miacuteos que estaacuteis rebeladosraquo Eugenio de Salazar hace un elogio de ella como poeta en un Soneto a la ilustre Poeta y Sentildeora Dontildea Elvira de Mendoza moradora en la ciudad de Santo Domingo (Serrano y Sanz 270 53)

Nacida en Burgos sobre el antildeo 1590 dontildea Luisa de Padilla merece un lugar aparte dentro del grupo de mujeres escritoras de su eacutepoca Por su estilo faacutecil y castizo su no-vedad de pensamientos y su rica erudicioacuten recibioacute el siguiente comentario de Manuel Serrano y Sanz laquoPocas figuras hay en nuestra historia literaria femenil que puedan compararse a esta eminente prosista acaso la maacutes notable de cuantas florecieron en Es-pantildea durante el siglo XVIIraquo (Serrano y Sanz 270 95-96) Este comentario y comparacioacuten deberiacutea ampliarse para que tambieacuten incluyese a laquola historia literaria varonilraquo

Dontildea Luisa fue defensora de la labor que la Inquisicioacuten estaba realizando en la laquolim-piezaraquo de mujeres laquosoldados del demonioraquo que existieron en algunas provincias espa-ntildeolas en aquel tiempo Muchas de las mujeres que combinaban la magia con los po-deres curativos fueron condenadas no solamente por hombres de la Inquisicioacuten sino tambieacuten por mujeres de todas las clases sociales como es el caso de Luisa de Padilla condesa de Aranda En su obra Elogios de la verdad e invectiva contra la mentira preveniacutea contra aquellos que practicaban artes en contra de la religioacuten cristiana La magiacutea negra seguacuten Padilla era la causante de que muriesen casi tantas personas como otras causas naturales habieacutendose descubierto hasta seis mil brujas en Vizcaya y Guipuzcua con-fesando una mujer de un pueblo pequentildeo haber matado con su laquomagiaraquo a ochocientas personas (Perry 31) Eran estos laquomales de ojoraquo y maldiciones seguacuten la autora las causas de que se secasen los pechos de las madres lactantes que se separasen las parejas casa-das y que abortasen las embarazadas (Perry 31)

Si se tiene en cuenta que dontildea Luisa estuvo emparentada con la maacutes rancia aristocra-cia de su tiempo o lo que es lo mismo con algunos de aquellos que en cierta manera dirigiacutean los destinos de Espantildea en aquella eacutepoca (Duques de Lerma Duque de Uceda Marqueacutes de Cueacutellar Conde de Santa Gadea Marqueacutes de Belmonte por citar algunos) se comprenderaacute mejor su identificacioacuten con una institucioacuten que en teoriacutea velaba por la salvaguarda de los valores laquoeternosraquo de una Espantildea destinada a ser la campeona del ca-tolicismo durante los siglos XVI y XVII El padre de dontildea Luisa fue don Martiacuten de Padilla y Manrique extraordinario militar que proboacute su valor contra enemigos moriscos ingle-ses holandeses piratas berberiscos y el renegado genoveacutes Muley Faxad Fue veterano de la batalla de Lepanto donde apresoacute a cuatro galeras y acompantildeoacute con su escuadra a la reina Dontildea Margarita de Austria cuando vino de Geacutenova en 1598 laquoHabiacutea obtenido a 24 de julio de 1587 el tiacutetulo de Conde de Santa Gadea y en 1596 el de Capitaacuten General de la Armada del mar Oceacuteanoraquo (Serrano y Sanz 27095-96)

Por otra parte tambieacuten se sabe que dontildea Luisa participoacute directamente y desde tem-prana edad en la praacutectica de algunas actividades intelectuales como la historia y la arqueologiacutea a la vez que dedicaba su tiempo a virtudes cristianas como la caridad y el socorro de los necesitados (Serrano y Sanz 270 97) Resulta mucho maacutes faacutecil compren-

168 JUAN FRANCISCO MAURA

der la postura ideoloacutegica de esta gran mujer si tienen en cuenta ademaacutes de los factores antes mencionados otros tantos de caraacutecter biograacutefico concernientes a su educacioacuten y matrimonio

Otra escritora fue la mexicana dontildea Mariacutea Casilda Pozo natural de Temestla (Meacutexi-co) Nacida en el mes de abril de 1682 dejoacute escrita su biografiacutea en 16 cuadernos el ma-nuscrito original se encuentra en la biblioteca del colegio de San Gregorio de Meacutexico Fue su confesor el jesuiacuteta Domingo Quiroga que fue quieacuten la incitoacute a escribir su obra (Serrano y Sanz 270 137) Sor Juana de San Antonio aparece a principios del siglo XVII formando parte de un grupo de religiosas espantildeolas que fueron a Manila por la ruta de Meacutexico Ademaacutes de distinguirse por sus cualidades personales su obra interesa por ofrecer informacioacuten testimonial y costumbrista acerca de la forma de vestir de chinos y japoneses (Serrano y Sanz 270 225)

Otra monja esta vez ecuatoriana fue Gertrudis de San Ildefonso Nacida en 1652 profesoacute su vocacioacuten en el convento de Santa Cruz de Quito dejando escrita su vida por mandato de su confesor el padre Martiacuten de la Cruz el cual hizo una biografiacutea laquoen tres gruesos voluacutemenesraquo Gertrudis de San Ildefonso murioacute en 1709 (Serrano y Sanz 270 300) en olor de santidad

Sor Mariacutea Ana Agueda de San Ignacio nacioacute el 3 de marzo de 1695 en la dioacutecesis de la puebla de los Angeles en un rancho del lugar de Santiago Tecaliacute (Serrano y Sanz 270300) Esta monja mexicana escribioacute varias obras durante su vida conventual a lo largo de la cual desempentildeoacute el cargo de priora por muchos antildeos Entre sus obras todas de caraacutecter piacuteo y de laquoamor divinoraquo escribioacute un curioso y laquocopiosoraquo tratado de la Leche virginal de la Soberana Madre de Dios El padre Fr Juan de Villa Saacutenchez hace el siguiente comentario al respecto laquoen que hablando primero en sentido natural de los beneficios que debemos a Nuestra Sentildeora pasa a tratar en sentido miacutestico y alegoacuterico enten-diendo en la leche la doctrinaraquo (Serrano y Sanz 270301) Mexicana fue tambieacuten Sor Petronila de San Joseacute que ejercioacute como abadesa del Real monasterio de Jesuacutes Mariacutea de la ciudad de Meacutexico Escribioacute Vidas de varias religiosas ejemplares obra que tiene su im-portancia ya que al parecer laquoDe esta obra se sirvioacute D Carlos de Siguumlenza y Goacutengora para escribir su Parayso Occidental (Meacutexico 1684) seguacuten eacutel mismo declara en el proacutelogo diciendo lsquoa quien si hay algo bueno en esta historia se le debe todorsquoraquo (Serrano y Sanz 270 354) Menos conocida fue su compatriota Sor Luisa de Santa Catalina natural de Xacona laquopueblo situado en las inmediaciones de Zamora (Meacutexico)raquo siendo bautizada en 1682 Escribioacute Cartas espirituales a su confesor el P Juan Loacutepez de Aguado (Serrano y Sanz 270 361-62)146

Todos estos escritos la mayoriacutea de ellos ignorados por el gran puacuteblico tienen la im-portancia de darnos una perspectiva diferente En otras palabras ensentildearnos la maacutes refinada sensibilidad de muchas mujeres que permanecieron y en su mayoriacutea siguen permaneciendo a laquooscurasraquo de una eacutepoca tan rica de la literatura espantildeola como fue el Siglo de Oro Este siglo fue tambieacuten en su dimensioacuten literaria y artiacutestica patrimonio de la mujer

146 Para profundizar en muchas de estas escritoras hispano-americanas la consulta de la Biblioteca Hispano-Americana de Beristain de Souza resulta de capital importancia

169ESPANtildeOLAS DE ULTRAMAR EN LA HISTORIA Y EN LA LITERATURA

Sor Nada ardores divinos de una monja adolescente escritos ineacutedi-tos de una recieacuten profesa del siglo XVI147

iexclQueacute encantadores son tus amores hermana miacutea espo-sa iexclQueacute deliciosos son tus amores maacutes que el vino Y el aroma de tus perfumes es mejor que el de los baacutelsamos Miel virgen destilan tus labios esposa miel y leche hay en tu lengua y el perfume de tus vestidos es como aroma de incienso (Cantar de los Cantares 4 10-11)

Sor Nada llamada asiacute por humildad seguacuten dice el Indice de manuscritos de la Biblio-teca Nacional de Madrid es uno de los ejemplos maacutes desconocidos e interesantes que tenemos de la poesiacutea y prosa amoroso-religiosa del siglo XVII Hasta la fecha nunca se habiacutea publicado su obra e incluso hasta el antildeo 1995 para mi sorpresa no habiacutea copias microfilmadas de sus manuscritos en la Biblioteca Nacional Serrano y Sanz en su libro Apuntes para una Biblioteca de Escritoras Espantildeolas hace una escueta y pasajera mencioacuten de esta mujer y de su obra (68-69) siendo eso todo lo que hasta ahora se sabiacutea de ella Sus escritos consisten en los siguientes manuscritos

1 laquoEn queacute consiste un verdadero amor de Diosraquo 9 hojas uacutetiles en 4ordm letra del siglo XVII Biblioteca Nacional de Espantildea Manuscrito 1295926

2 laquoPintura del Propio Amorraquo laquoPintura del propio Amorraquo 10 hojas uacutetiles en 4ordm letra del siglo XVII Biblioteca Nacional de Espantildea Manuscrito 1295927

3 laquoEsplicacioacuten sobre en queacute consiste la paz del Almaraquo laquoQuartillas aacute un Alma que padece soledad interiorraquo 7 hojas uacutetiles en 4ordm letra del siglo XVII Biblioteca Nacio-nal de Espantildea Manuscrito 1295828

En cuanto a su persona soacutelo se nos dice que laquose encubrioacute con este seudoacutenimo laquoSor Nadaraquo Esta monja desconocida de origen hispanoamericano posee toda la frescura e ingenuidad de una joven apasionada metida por vocacioacuten u obligacioacuten a ejercer la profesioacuten maacutes comuacuten para mujeres de cierta clase social de su tiempo En sus liacuteneas podemos encontrar un misticismo simple incluso en algunos momentos infantil pero a su vez lleno de una fuerza y sensualidad interior poco comuacuten en escritos de este geacute-nero que desborda los liacutemites del laquoamor divinoraquo a traveacutes de los diaacutelogos entre el Alma y el Esposo Sor Nada consigue proyectar su amor a Dios maacutes allaacute de una experiencia romaacutentica Su experiencia es sincera y genuinamente miacutestica trascendiendo la imita-cioacuten o la propia creacioacuten poeacutetica ficcionalizada (Hatzfeld 30) Algunos pasajes son de un

147 Veacutease mi artiacuteculo Sor Nada ardores divinos de una monja adolescente escritos ineacuteditos de una monja profesa del siglo XVIIraquo Espeacuteculo Revista de estudios literarios 26 (2004) 1-10 Universidad Complutense de Madrid http wwwucmesinfoespeculonumero26sornadahtml

170 JUAN FRANCISCO MAURA

alto contenido eroacutetico con sustantivos y metaacuteforas que recuerdan la maacutes iacutentima unioacuten amorosa en unos casos y el tierno amor maternal en otros

[T]e miro Jesus mio desnudo a las inclemencias del tiempo y ardien-do en puro fuego de Amor por la salud de las Almas y me ensentildeas a que te ame con todo mi corason y puresa de espiritu No atendiendo ni buscando umanos intereses ni a solisitar consuelos ni regalos espi-rituales que suelen empantildear la puresa del noble corason No mi Jesus amable pues antes me ensentildeaste tu puro Amor que desnudo sean [sic] de encaminar mis passos desde el pesebre asta la cuna en donde te miro tan desnudo como el pesebre y todo Sentildeor por mi Amor (Mss 12959 26 hoja 1 v)

El manuscrito (12959 27) de la mencionada serie de tres contiene algunas correccio-nes quizaacute hechas por el confesor o quizaacute por ella misma cuando se dirige con excesiva familiaridad y arrebatado fervor a su Amado148 He escogido el manuscrito (12959 Caja 28) en primer lugar por ser el ejemplo maacutes representativo de su poesiacutea y prosa En este manuscrito encontramos de forma maacutes directa que alegoacuterica toda la frescura de un diaacutelogo entre Jesuacutes y el alma que raya como diriacutea Cervantes laquoa la llana y sin rodeosraquo (667 lib 2 cap 38) con el doloroso y a veces desesperado deseo de la entrega y la unioacuten final con el Amado La ortografiacutea no ha sido corregida respetaacutendose el texto ori-ginal149 Veamos el siguiente fragmento

Mira que te amo con Amor de padre y con Amor de esposo el mas fino y puro enamorado que no tan solo me presio de darte mi mano sino tambien todo mi cuerpo y sangre para que con mi pan de vida te sustentes y te regales a tus anchuras y que con mi propio espiritu vivas en paz como tu lo deseas y que mis amores sean unico alivio en tus trabajos en esta mortal vida pues si esto es asi y sabes que muero por darte vida dime esposa mia de que te fatigas Dame querida tus bras-sos y dime si me amas como yo te amo (Hoja 4)

148 La antologiacutea de Promis ha procurado insertar entre los textos antoloacutegicos algunos que se refieren a la es-critura de mujeres fundamentalmente de aquellos generados en el interior de los espacios conventuales Estos textos se fundan como laquohistorias de vidasraquo y responden casi siempre a los requerimientos de los confesores de las monjas coloniales En este sentido resulta valiosiacutesima la incorporacioacuten de la llamada Relacioacuten autobiograacute-fica de Sor Ursula Suaacuterez como una muestra significativa de la escritura monjil entendida en esta eacutepoca (como tambieacuten en la tradicioacuten europea medieval) inserta en las denominadas laquolabores de manoraquo de las religiosas ya que el texto escrito por mandato se convertiacutea en una suerte de entramado o tejido linguumliacutestico es decir en un nuevo bordado que la mayor parte de las veces el confesor convertido en censor iba haciendo tachando y enmendando En la antologiacutea Promis agrega un texto de Sor Tadea Garciacutea de la Huerta titulado Relacioacuten de la inundacioacuten que hizo el riacuteo Mapocho de la ciudad de Santiago de Chile en el monasterio de Carmelitas titular de San Rafael el diacutea 16 de junio de 1783 se trata de un poema tipo romance escrito en versos octosilaacutebicos y que da cuenta de lo sucedido ese diacutea en el convento (Resentildea de la literatura del reino de Chile de Joseacute Promis Eddie Morales Pintildea httpwwwupaclpublicaciones2002literatura_promishtm)

149 Son frecuentes las faltas ortograacuteficas Una de ellas es el uso constante del seseo La ausencia de acentua-cioacuten y puntuacioacuten exceptuando alguacuten punto o coma arbitrario no seguido casi nunca de mayuacutescula inicial lo mismo que el uso igualmente aribitrario de la h o de b v r q g j m n x etc No olvidemos de la misma forma la laxitud linguumliacutestica existente en el siglo XVII (no sabemos a queacute parte de eacuteste pertenece el manuscrito) asiacute como la joven edad de la monja

171ESPANtildeOLAS DE ULTRAMAR EN LA HISTORIA Y EN LA LITERATURA

Los versos del presente manuscrito poseen la misma fuerza que tiene su prosa Con una estructura estroacutefica indefinida estaacuten aparentemente corregidos por alguien que tu-vo la oportunidad de conocer personalmente a la autora Muy probablemente se trate del padre al que hace referencia al principio del primer manuscrito laquoMandame el Pd que le declare en que consiste un verdadero amor a Diosraquo a continuacioacuten continuacutea con su caracteriacutestica humildad laquo[O]bedesere y dire lo q Dios me inspire segun mi rudesa y simplisidadraquo (Mss 12959 26) En cuanto a la fuerza pasional de esta joven observamos con cierta tristeza coacutemo aparece sublimada en sus escritos con toda la enegiacutea de una joven mujer llena de intensidad y vida pero encerrada en los liacutemites de un convento Veamos un ejemplo en donde responde el Alma en los siguientes versos

O mi enamorado Jesus O mi dulse y tierno amanteO alegria de los sielos O dulse Jesus amable

(Toda Sentildeor me derrito toda Sentildeor me desagoy quiero vivir por ti ea sentildeor abrasadme) [Tachado en el original]

Toda Sentildeor me derrito toda Sentildeor me desagoy quiero morir por vos ea Sentildeor que ya acabo

Ya tus amores me llaman ya tus perfumes me traencon suspiros y agonias Sentildeor hasta que te alcanse

O mi Jesus amoroso no puedo mas dilatarmeya la pasiensia me falta dulse Jesus abrasadme

(No puedo vivir sin vos no puedo mas dilatarmeya la pasiensia me falta dulse) [Tachado en el original]

No puedo vivir sin vos mi dulse Jesus amablepues me teneis echisada siendo mi esposo y mi Padre

Ay que me abraso Ay que me quemo del Amor deJesus nasareno como no tocan y tantildeen a fuego150

Estos versos llenos de arrebato sublimado conectan con toda la tradicioacuten miacutestica es-pantildeola que se remonta a Ramoacuten Llul y que culmina en el maacutes universal de nuestros

150 En toda la fuerza y simbologiacutea del amor maacutes iacutentimo del maacutes alto y sublime placer de la unioacuten de los amantes tal como lo encontramos en el Cantar de los Cantares y en San Juan de la Cruz Leemos en la Biblia

Ya me he quitado la tuacutenica iquestCoacutemo volver a vestirme Ya me he lavado los pies iquestCoacutemo volver a ensuciarlosMi amado metioacute su mano por el agujero (de la llave) y mis entrantildeas se estremecieron por eacutel Me levanteacute para abrir a mi amado Mis manos destilaron mirra y mis dedos mirra exquisita en el pestillo de la cerradura (5 3-5)

Nos ocurre lo mismo con San Juan de la Cruz en su insuperable poema laquoLlama de amor vivaraquo

iexclOh cauterio suaveiexclOh regalada llagaiexclOh mano blanda iexclOh toque delicadoque a vida eterna sabey toda deuda pagaMatando muerte en vida la has trocado

172 JUAN FRANCISCO MAURA

miacutesticos San Juan de la Cruz Esta tradicioacuten se extiende hasta finales del siglo XVII esto es hasta los finales del Barroco siendo un poco maacutes tardiacuteo en la Ameacuterica espantildeola Sin tener como propoacutesito discutir en el presente trabajo a queacute corriente miacutestica pertenece la obra de Sor Nada es necesario resaltar no obstante el hecho de que estaacute escrito por una mujer y ademaacutes de tierna edad El manuscrito 12959 Caja 26 termina con estas pa-labras laquo[T]odas estas boverias escrivi por entretenimiento siendo resien profesa en la religion Sor Nadaraquo Mas no por la juventud de su autora los escritos dejan de tener lo-gradas metaacuteforas imaacutegenes y siacutembolos sacados de la naturaleza La alegoriacutea de la unioacuten matrimonial poseeacute el fuego liacuterico de la maacutes apasionada de las relaciones amorosas vivi-ficada por perfumes flores insectos animales escarchas nieves o abrojos Por lo tanto aunque la narracioacuten destile cierta ingenuidad no carece por ello de un vocabulario rico con el sabor popular de la poesiacutea de los cancioneros y romances de tradicioacuten renacen-tista No ha sido otra mi intencioacuten que la de rescatar del olvido unos escritos en prosa y en verso llenos de frescura y espontaneidad que nos muestran la pasioacuten con que la joven novicia se laquoentrega en cuerpo y almaraquo a los menesteres de su profesioacuten guiada por un padre espiritual en esos primeros antildeos de formacioacuten Esta ha sido la razoacuten por la que presento a continuacioacuten el citado manuscrito en su totalidad

Sor Nada (Mss 1295928)

laquoEsplicacion sobre en que consiste la paz del AlmaraquolaquoQuartillas a un Alma que padece soledad interiorraquo

[7 hojas utiles en 4ordm letra del siglo XVII]

+

Esplicacion sobre en que consiste la paz del Alma

Pareseme segun mi rudo entender que la verdadera paz del Alma con-siste en una muy pura y buena consiencia en un corason liso y bien intensionado en una verdadera rectitud de espiritu en el qual el Alma procura bolar a Dios sin jamas detenerse a respetos umanos ni reparar en que me diran ni de que me censuraran sino me apresuro a seguir a unos entenderes y pareseres dorados en los quales pretende el mundo engantildear y ensuciar si se puede la puresa de un corason unicamente de Dios y de su Santa ley y se lo conserva cristalino con la divina asis-tencia de la gracia y comprendido de su Amor y temor siguiendo la luz divina de tan amante Sentildeor Dios y ombre verdadero con que este ilustrado corason ni se altera ni se mueve por los disfrasses dorados que ase el mundo y sus moradores mayormente con falssas amistades aunque con ellos muestre buena intension Con la misma grasia y luz de Dios conose el buen corason estos disfrasses que le ase el mundo y se retira de todo con espiritu y valor esto sin la menor alterasion sino que en suma paz se retira a buscar a Dios dentro de su mismo corason

173ESPANtildeOLAS DE ULTRAMAR EN LA HISTORIA Y EN LA LITERATURA

y se abrasa con su pura verdad en la qual se le descubren mil interio-res secretos tan solidos puros y verdaderos que la misma Alma queda abismada y de puro grandes no los puede bien comprender ni esplicar pero estos mismos secretos divinos le sirven de espuelas para no solo correr sino bolar con pies de plumas en seguimiento de su bien ama-do Jesus y como este soberano Sentildeor es tan amante de sus espossas las Almas luego que la ve bolar con pies de plumas la sale al encuen-tro en despoblado campo que se deve de llamar Campo de Amor de Dios y el mismo Sentildeor se viene a las manos por ser Dios que nos ama con Amor infinito de Padre benigno y amoroso con que asiendose en contra deso este divino enamorado en lo interyor de el Alma que le busca con ansias de servirle y amarle y en aquella soledad traban una conversasion amorosa y sensilla como la pluma simple de quien esto escrive

Divino enquentroDios y el Alma en la soledad

O Soberano Principe de la paz dise el Alma tus perfumes me traen a ti bolando porque alla en el mundo y sus valedores me pretendian engantildear y entretenerme con pegaminossas amistades que facilmen-te me pudieran envenenar y matarme apartandome de ti Mi dulse Jesus amable mi Redentor Soberano que con tantas ansias me sales al enquentro como siervo [ciervo] erido de mis Amores los quales tu Amor me ofrese para que con tu mismo Amor te ame y te sirva en paz sin perturbarme ni contristarme ni cansarme de padeser pasando si se ofrese por escarchas nieves espinas ni abrojos ni por otros diverssos trabajos ni piedras de contradision que tu me puedes permitir pues por mas que el mar se levante con sus ferosses olas contra mi ni piedras se me tiren al rostro en todo Sentildeor me quieres con serenidad pasifica sin la menor perturbasion Todo Sentildeor quieres que lo tome con Serenidad de espiritu y asi vengo a ti bolando para que mejor me ensentildees a vivir segun las leyes de tu noble condision que me son muy agradables por mas que el mundo me las despresie por segir sus vanidades y torsidas intensiones con apariensias de bien y con este engantildeo y bien me quie-ro mas a mi que no a mi proximo veo que segun mi pareser se pierden muchas Almas y tambien de aquellos que se depresian y pasan por muy espirituales Con que me paresen pocos los que llegan a padeser con desnudes151 de espiritu por tu purisimo Amor y me parese essas se quedan muy atrasadas en la virtud por el peligro de bolver muy atras el paso de modo que se pueden despentildear y pereser en su misma desgra-sia ya por soberbia o por otras enfermedades que se les pega al corason y asi lo pasan como siegos ignorantes sin advertir en sus peligros

151 La letra en cursiva es miacutea

174 JUAN FRANCISCO MAURA

este aquerdo Sentildeor y otros que tu verdad me ensentildea me ase venir uyendo de las paredes del mundo y me vengo a ti Dios mio bolando con las dos Alas del Amor y temor que tu mismo Amor me ofrese tan de gracia y tan de grado que no se duentildeo mio con que lo responder a tan soberano beneficio y finesa de tus entrantildeas de Amorvengo Sentildeor y esposo mio unicamente a descansar en ti pues los peli-gros del camino me an puesto en mucho sobresalto temiendo el per-derte y sin ti perderme para siempre por una eternidad sin fin pues deseo amado mio ganarme ganandote a ti y vivir en ti aora en vida y despues eternamente y estos cuidados me traen fatigada molida y cansada y no podre tener alivio y descanso sino viendome entre tus brassos aunque sea estando en cruz pues ese es el fin de mis deseos vivir y morir en ti ablame mi cordero manso y ensentildeame a que ver-daderamente te ame como fiel esposa ea mi caro amigo dame la ma-no pues sabes Amor mio que en mi no ay mano sin tu misma mano y asi mi Dios y Sentildeor mi Principe Soberano con umilde rendimiento y deseos de alcansarte te suplico me des la mano y me consueles en estos mis trabajos Deseo Sentildeor vivir en paz y los malos amores de mi Naturaleza flaca no me dejan detentar y no quieren por mi desgrasia atropellar con las leyes de tu Amor ni quisiera perturbar mi corason quando me veo con un torvellino de olas y contratiempos que a menu-do me suelen sercar pero si tu Sentildeor me das la mano nada temo sino que me aseguro y vivire en paz sin que me fatiguen los contratiempos pues mi mano en la tuya y mi espiritu en el tuyo por mas borrascas que me envistan no seran bastantes para rendir mi voluntad a la suya bien si para pronunsiar un fiat que resuene bien atras en tus oidos y que en medio de mis fatigas me ponga a cantar tus divinas misericor-dias hea Sentildeor ya pretendo serrar mis labios por no desir mas bove-rias y deseo Sentildeor oir tus palabras de vida eterna abla Sentildeor que tu sierva oye con atension y cuydado mira mi Dios que se me ase tarde y espero con prisa deseando saborearme y aprovecharme de los ecos de tu Santa dotrina pues todas tus palabras saben a eterna vida callen pues mis sentidos y potensias y todo se ponga en paz pues mi dulse y soberano Sentildeor no se escusara de ablar me aun que en mudo silensio hea mi gran Prinsipe de la paz ablame que tus puros amores me traen perdida por estos asperos montes y mis cortos pasos no te pueden dar alcanse mirame mi Dios a tus pies postrada como un vil gusano y me-nor ormiga de la tierraabla Jesus y dise a su esposa el Alma querida esposa mia que me pides y por que te muestras tan fatigada y mal sufrida no vives como corde-rita del campo buscando de mis pechos el sustancial pasto mi Amor no te sustenta y mi grasia te promete eterna vida pues dime amada de que te fatigas y te muestras mal sufrida mira que te amo con Amor de padre y con Amor de esposo el mas fino y puro enamorado que no tan solo me presio de darte mi mano sino tambien todo mi cuerpo y

175ESPANtildeOLAS DE ULTRAMAR EN LA HISTORIA Y EN LA LITERATURA

sangre para que con mi pan de vida te sustentes y te regales a tus an-churas y que con mi propio espiritu vivas en paz como tu lo deseas y que mis amores sean unico alivio en tus trabajos en esta mortal vida pues si esto es asi y sabes que muero por darte vida dime esposa mia de que te fatigas Dame querida tus brassos y dime si me amas como yo te amoResponde el Alma152 Tu mi Dios sabes si yo te amo pues de mi solo se que mis deseos y ansias buelan a ti mas no alcanso a saber si te amo como tu de-seas ser amado y como desconfio tanto de mi y de mis prosederes falssos temo Dios mio perderme y perderte y asi Sentildeor pues no desechas mis Amores y te muestras tan fino en amarme te pido me ensentildees a vivir segun las leyes de tu pura verdad y fina condisionhija mia dise Dios la prueva de un verdadero Amor consiste en sufrir callar y padeser por mi unico Amor y en todo seguir mis pasos sin ja-mas retroseder por mas fragoso que se muestre el camino pues nunca seran tantas las espinas las escarchas ni las nieves ni los vientos bo-rrascosos que te se ofrescan pasar por mi Amor como los que mi tierno y desinteresado Amor paso por ti y siempre con mis pies descalssos y asi hija y esposa mia muestrate costante en seguir lo perfecto de mis passos pues mi braso fuerte sera en ti y peleara por ti y te sera el todo en tus nesesidades y mi Amor te convertira en dulse y suave lo amargo y molesto a la condision de la carrne

Responde el Alma

O mi enamorado Jesus O mi dulse y tierno amanteO alegria de los sielos O dulse Jesus amable

(Toda Sentildeor me derrito toda Sentildeor me desagoy quiero vivir por ti ea sentildeor abrasadme) [Tachado en el original]

Toda Sentildeor me derrito toda Sentildeor me desagoy quiero morir por vos ea Sentildeor que ya acabo

Ya tus amores me llaman ya tus perfumes me traencon suspiros y agonias Sentildeor asta que te alcanse

O mi Jesus amoroso no puedo mas dilatarmeya la pasiensia me falta dulse Jesus abrasadme

(No puedo vivir sin vos no puedo mas dilatarmeya la pasiensia me falta dulse) [Tachado en el original]

No puedo vivir sin vos mi dulse Jesus amablepues me teneis echisada siendo mi esposo y mi Padre

152 La aparicioacuten de una mayuacutescula al principio de una oracioacuten es algo totalmente arbitrario en este ma-nuscrito dada la libertad ortograacutefica de la autora Como se puede observar en la mayor parte de las veces no es el caso

176 JUAN FRANCISCO MAURA

Ay que me abraso Ay que me quemo del Amor deJesus nasareno como no tocan y tantildeen a fuego

Responde Jesus Hija mia tus simples vozes oygo y aunque resuenan bien a mis oidos pero te deseo mas mansa y pasifica en tus fervores ya sabes que no siempre as de vivir en mantillas ni a los pechos de tu Madre por que es rason que padescas con espiritu fuerte como mu-jer valerosa por que a una esposa del Rey soberano y prinsipe de la paz no le estan bien chiquerias ni fervores de nintildea malcriada y ya es ora que la destete su Madre la Naturaleza y que empesando su nueva vida camine con el favor de mi grasia sigiendo mis passos de eterna vida esto con sus pies descalssos segun mis leyes de Amor puro y desinteresado lo tienen ordenado153 y vivir en paz como lo deje en-cargado a mis apostoles Santos repitiendoles varias vezes Vivir en pas y caridad esto es un vivir en Dios y Dios en el Alma y asi hija mia el Alma que vive en paz vive en mi Como mis cortesanos en el cielo y pues me pides que te ensentildee a vivir segun las leyes de mi condision Repito el desir que te debes mostrar sufrida en todo tiempo y estado sin permitir en tu corason que ni aun los fervores se adelanten con estremos ni ademanes sino atiende y aprende de mi purisima Madre pues siempre la veras si bien lo consideras que mientras vivio en el mundo en todos sus trabajos se mostro firme fuerte costante como piedra diamante Pues mirandome nintildeo entre sus brasos desnudo en el pesebre desnudo y crusificado en los brassos de una cruz En estos y otros passos no se mudo su rostro sino que en suma serenidad y pasifico corason toda se sacrificaba enteramente en los brassos de mi Amor y rendido su corason y voluntad en la de mi eterno Padre por ejemplo te la doy y deseo que aprendas de sus nobles calidades pues te aseguro carisima que las leyes de mi condision y pura verdad todo lo allaras enserrado en el corason de mi purisima Madre sedle fiel y descansaras en paz

+

Quartillas a un alma que padese soledad interior

1Un Alma afligida y tristese ve en un campo desiertay en el su esposo la tieneAtormentada y sedienta

153 Es a traveacutes de estas liacuteneas lo que hace suponer que la autora de este diaacutelogo amoroso entre el Alma y Je-suacutes es novicia esto es laquoque estaacute empesando su nueva vidaraquo En las mismas liacuteneas una vez maacutes se hace alusioacuten al laquodesteteraquo de su vida civil laquoa una esposa del Rey soberano y principe de la paz no le estan bien chiquerias ni fervores de nintildea malcriada y ya es ora que la destete su Madre la naturalesaraquo (fol 5)

177ESPANtildeOLAS DE ULTRAMAR EN LA HISTORIA Y EN LA LITERATURA

2Pendiente se ve en el AyreSolo un hilo la sustentasin tocar el pie en el sueloporque del no tome tierra

3Mirandola esta yto a ytoaquel sol que la atraviesay la enviste con sus rayosmas ella no pestantildeea

4Como sigarra padese y como a tal se atormentabatiendo sus mismas Alasy el corason se atraviesa

5Con penas sustos temoresquando se mira assi mesmasin tener valor en nadaporque es la misma flaquesa

6Pero el Amor de su esposotoda su atension le llevay la pone en un abismopero cubierto en tiniebla

7Desea dar algun bueloy subir con ligeresapero se mira travadacon una fuerte cadena

8Clama suspira y padeseMas del todo se sujetaRindiendo su voluntadA la divina clemencia

9Los enemigos del AlmaCruelmente le asen guerray ella aunque firme y constantelos reselos la atormentan

178 JUAN FRANCISCO MAURA

10de todos modos padeseaunque gosa la asistensiadel divino esposo amadoque en su interior se recrea

11Solo de verla penary con verla tan serenadise resibe mil gustosde su sigarra pequentildea

12Le sabe el mundo a mil yelesy su trato le atormentaviendo en el mil falsedadesque todas saben a tierra

13Para poderse librardeja de correr y buelacon las Alas del Amory el mismo Amor se la lleva

Una vida dedicada a un amor divino un amor que le haraacute llenar un buen nuacutemero de cuartillas dedicadas a tan alta empresa Se desconoce si la vocacioacuten de Sor Nada con-tinuoacute con tanta intensidad el resto de sus diacuteas Ciertamente la vida en el covento no era faacutecil En algunos casos la experiencia era traumaacutetica incluso fatal para algunas de las adolescentes de la Ameacuterica Espantildeola Las reglas del claustro eran severas por varias razones Estas joacutevenes si no teniacutean el permiso de la superiora no podiacutean recibir visitas no podiacutean volver a sus casas su correspondencia era censuraba y no podiacutean salir del periacutemetro conventual Igualmente se levantaban antes del amanecer para oir misa tra-bajaban el resto del diacutea y lo maacutes interesante es que muchas veces esta vida era aceptada por muchas

Page 34: Tercera parte: Mujeres en la vida intelectual - …parnaseo.uv.es/Editorial/Maura/TerceraParte.pdf · La Biblia, por su parte, hace repetidas menciones de la mujer y sobre el comporta-

164 JUAN FRANCISCO MAURA

de los documentos maacutes importantes con que contamos en relacioacuten a la aportacioacuten fe-menina en el proceso de la conquista de Ameacuterica Su importancia viene dada por varios factores Primero es uno de los primeros testimonios mdashsi no el primeromdash en donde se expone abiertamente la indispensable colaboracioacuten de las mujeres en el descubrimien-to y conquista de tierras en el Nuevo Mundo laquoQue si no fuera por ellas todos fueran acabadosraquo En segundo lugar la informacioacuten vertida en estas liacuteneas presenta en parte la manera de pensar de una mujer espantildeola en tales circunstancias Extraordinario tes-timonio de primera mano que nos da una idea de lo que significoacute en muchos casos el valor y entrega constantes de muchas de estas mujeres que auacuten a riesgo de perder sus vidas no dudaron en luchar al lado de los hombres por una causa que consideraban laquocomuacutenraquo

La relevancia histoacuterica de dicha carta hace que merezca ser transcrita en su totali-dad

Carta de dontildea Isabel de Guevara a la princesa gobernadora dontildea Juana exponiendo los trabajos hechos en el descubrimiento y conquista del Riacuteo de la Plata por las mujeres para ayudar a los hombres y pidiendo repartimiento

para su marido Asuncioacuten 2 de julio de 1556

Muy alta y muy poderosa sentildeora

A esta provincia del Riacuteo de la Plata con el primer gobernador de ella don Pedro de Mendoza hemos venido ciertas mujeres entre las cuales ha querido mi ventura que fuese yo la una y como la armada llegase al puerto de Buenos Aires con mil quinientos hombres y les faltase el bastimento fue tamantildea el hambre que a cabo de tres meses murie-ran los mil esta hambre fue tamantildea que ni la de Jerusalem se le puede igualar ni con otra ninguna se puede comparar Vinieron los hombres en tanta flaqueza que todos los trabajos cargaban de las pobres mu-jeres asiacute en lavarles las ropas como en curarles hacerles de comer lo poco que teniacutean limpiarlos hacer centinela rondar los fuegos armar las ballestas cuando algunas veces los indios les veniacutean a dar guerra hasta cometer a poner fuego en los versos y a levantar los soldados los que estaban para ello dar arma por el campo a voces sargentean-do y poniendo en orden los soldados porque en este tiempo como las mujeres nos sustentamos con poca comida no habiacuteamos caiacutedo en tanta flaqueza como los hombres Bien creeraacute V A que fue tanta la so-licitud que tuvieron que si no fuera por ellas todos fueran acabados y si no fuera por la honra de los hombres muchas maacutes cosas escribiera con verdad y los diera a ellos por testigos Esta relacioacuten bien creo que la escribiraacuten a V A maacutes largamente y por eso cesareacute Pasada esta tan peligrosa turbunada determinaron subir el riacuteo arriba asiacute flacos como estaban y en entrada de invierno en dos bergantines los pocos que quedaron vivos y las fatigadas mujeres los curaban y los miraban y les guisaban la comida trayendo la lentildea a cuestas fuera del naviacuteo y animaacutendolos con palabras varoniles que no se dejasen morir que presto dariacutean en tierra de comida metieacutendolos a cuestas en los

165ESPANtildeOLAS DE ULTRAMAR EN LA HISTORIA Y EN LA LITERATURA

bergantines con tanto amor como si fueran sus propios hijos Y como llegamos a una generacioacuten de indios que se llaman tinbues sentildeores de mucho pescado de nuevo los serviacuteamos en buscarles diversos modos de guisados porque no les diese en rostro el pescado a causa de que lo comiacutean sin pan y estaban muy flacos Despueacutes determinaron subir el Paranaacute arriba en demanda de bastimento en el cual viaje pasaron tanto trabajo las desdichadas mujeres milagrosamente quiso Dios que viviesen por ver que en ellas estaba la vida de ellos porque todos los servicios del naviacuteo los tomaban ellas tan a pechos que se teniacutea por afrentada la que menos haciacutea que otra sirviendo de marear la vela y gobernar el naviacuteo y sondar de proa y tomar el remo al soldado que no podiacutea bogar y escotar144 el naviacuteo y poniendo por delante a los soldados que no se desanimasen que para los hombres eran los trabajos verdad es que a estas cosas ellas no eran apremiadas ni las haciacutean de obliga-cioacuten ni las obligaba si solamente la caridad Asiacute llegaron a esta ciudad de la Asuncioacuten que aunque ahora estaacute muy feacutertil de bastimentos en-tonces estaba de ellos muy necesitada que fue necesario que las muje-res volviesen de nuevo a sus trabajos haciendo rosas con sus propias manos rosando y carpiendo y sembrando y recogiendo el bastimento sin ayuda de nadie hasta tanto que los soldados guarecieron de sus fla-quezas y comenzaron a sentildeorear la tierra y adquirir indios e indias de su servicio hasta ponerse en el estado en que ahora estaacute la tierra He querido escribir y traer a la memoria de V A para hacerle saber la ingratitud que conmigo se ha usado en esta tierra porque al presente se repartioacute por la mayor parte de los que hay en ella asiacute de los anti-guos como de los modernos sin que de miacute y de mis trabajos se tuviese ninguna memoria y me dejaron de fuera sin me dar indio ni ninguacuten geacutenero de servicio Mucho me quisiera hallar libre para me ir a presen-tar delante de VA con los servicios que a SM he hecho y los agravios que ahora se me hacen mas no estaacute en mi mano porque estoy casada con un caballero de Sevilla que se llama Pedro de Esquivel que por servir a SM ha sido causa que mis trabajos quedasen tan olvidados y se me renovasen de nuevo porque tres veces le saqueacute el cuchillo de la garganta como allaacute VA sabraacute A que suplico mande me sea dado mi repartimiento perpetuo y en gratificacioacuten de mis servicios [en el origi-nal del AHN Diversos doc 141 dice ademaacutes mande que sea proveydo mi marido de alguacuten cargo conforme a la calidad de su persona pues el de su parte por sus servicios lo merece] lo merece Nuestro sentildeor acre-ciente su Real vida y estado por muy largos antildeos De esta ciudad de la Asuncioacuten y de julio 2 1556 antildeosServidora de V A que sus Reales manos besa

Dontildea Isabel Guevara

144 Sacar agua de un riacuteo acequia o presa

166 JUAN FRANCISCO MAURA

Sobremdash A la muy alta y muy poderosa sentildeora Princesa dontildea Joana Gobernadora de los reinos de Espantildea etc ndash En su Consejo de Indias (Isabel de Guevara 619-21)

Iroacutenicamente la carta teniacutea que llegar a manos de la desdichada heredera del trono de Castilla e hija de los Reyes Catoacutelicos Juana laquola Locaraquo que habiacutea muerto el antildeo an-terior Son profeacuteticas las palabras de esta mujer no soacutelo porque sus hechos personales quedasen en el olvido sino porque incluso se ha borrado la historia de las mujeres en el Nuevo Mundo negando su presencia Por lo menos Isabel Guevara tuvo acceso a una pluma iquestCuaacutentas seriacutean las que ni siquiera sabriacutean escribir

Otra contemporaacutenea fue dontildea Leonor de Iciz que vivioacute durante la segunda mitad del siglo XVI Interesa sobre todo por los sonetos que escribioacute en elogio de Ercilla soldado que participoacute en la conquista de Chile y que se inmortalizoacute con su obra La Araucana (Serrano y Sanz 269 534) Lo mismo hizo Dontildea Bernarda Lintildeaacuten en 1610 autora de otro soneto en memoria del capitaacuten Gaspar Peacuterez de Villagraacute que participoacute en la conquista de Nuevo Meacutexico (Serrano y Sanz 270 14) Los escritos de estas mujeres tratan de de dos de las eacutepicas maacutes dramaacuteticas de la conquista

En el Peruacute y en pleno siglo XVII aparece otra fundadora de conventos Sor Bernardina de Jesuacutes que ademaacutes fue comparada con Santa Teresa por la semejanza de sus laquocartasraquo con las de la santa de Avila Fue fundadora del convento de Tacunga en Quito maacutes tarde destruiacutedo por un terremoto Dice Serrano y Sanz con respecto a su biografiacutea un tanto legendaria que fue carmelita descalza de Lima y hermana de Dontildea Mariacutea Benavides y Esquivel abuela de D Pedro de Peralta Barnuevo (Serrano y Sanz 269 553) Dicen que esta santa se alimentoacute durante treinta antildeos con laquochochos y caacutescaras de naranja hecho tan raro como increiacuteble Cuando fallecioacute reparaban las monjas en ponerle una vara de azucenas porque habiacutea sido casada y aquellas flores aparecieron milagrosamente sobre el cadaacuteverraquo (Serrano y Sanz 269 553)

Otra limentildea del primer cuarto del siglo XVII con reputacioacuten de santa fue Dontildea Luisa Melgarejo En este caso no se trata de una religiosa de oficio sino de la mujer del doctor Juan de Soto La uacutenica diferencia es que dontildea Luisa al parecer teniacutea laquovisiones y reve-lacionesraquo lo que debioacute poner nervioso a maacutes de un miembro del tribunal del laquoSanto Oficioraquo que consideraron sus escritos laquoculpadosraquo De su papel de laquosantaraquo pasa por lo tanto al de laquoposesaraquo o laquoendemoniadaraquo El inquisidor de Lima Gaitaacuten escribioacute un infor-me donde a traveacutes de la opinioacuten puacuteblica y de otras averiguaciones se deciacutea que dontildea Luisa Melgarejo laquomujer santaraquo sabiacutea cuando las almas de los difuntos saliacutean del Purga-torio El diacutea 14 de noviembre de 1623 se decidioacute tomar posesioacuten de todos los cuadernos en los que habiacutea escrito las experiencias de todos sus laquoarrobos suspensiones extasis y revelacionesraquo Estos cuadernos una vez recogidos presentaron toda una serie de al-teraciones borrones adiciones enmiendas incluso diferente letra por lo que despueacutes de haber sido examinados resultaron culpables145 Excelente imaginacioacuten debioacute tener dontildea Luisa Melgarejo la suficiente al parecer para convencer a algunos miembros de la iglesia de que en sus escritos laquohabiacutea algoraquo que mereciacutea la pena Estas cosas ocurriacutean en Lima uno de los centros culturales maacutes importantes de la vida social y poliacutetica en la Ameacuterica espantildeola Lima a comienzos del siglo XVII seguacuten el empadronamiento llevado

145 Serrano y Sanz 270 47 Veacutease J T Medina Historia del tribunal del Santo Oficio de la Inquisicioacuten de Lima (1569-1820) (Santiago Imprenta Gutemberg 1887) Tomo II 34-41

167ESPANtildeOLAS DE ULTRAMAR EN LA HISTORIA Y EN LA LITERATURA

a cabo en 1614 por el marqueacutes de Montesclaros era una ciudad de 25000 habitantes de los que 11000 eran espantildeoles El nuacutemero de religiosos y religiosas llegaba a 1720 (Pittaluga 77)

Se sabe que en la Isla de Santo Domingo durante el siglo XVI nacioacute o al menos resi-dioacute una poeta de ceacutelebre apellido en los aconteceres del Nuevo Mundo Dontildea Elvira de Mendoza de la que se conserva un manuscrito en la Real Academia de la Historia laquoCantares miacuteos que estaacuteis rebeladosraquo Eugenio de Salazar hace un elogio de ella como poeta en un Soneto a la ilustre Poeta y Sentildeora Dontildea Elvira de Mendoza moradora en la ciudad de Santo Domingo (Serrano y Sanz 270 53)

Nacida en Burgos sobre el antildeo 1590 dontildea Luisa de Padilla merece un lugar aparte dentro del grupo de mujeres escritoras de su eacutepoca Por su estilo faacutecil y castizo su no-vedad de pensamientos y su rica erudicioacuten recibioacute el siguiente comentario de Manuel Serrano y Sanz laquoPocas figuras hay en nuestra historia literaria femenil que puedan compararse a esta eminente prosista acaso la maacutes notable de cuantas florecieron en Es-pantildea durante el siglo XVIIraquo (Serrano y Sanz 270 95-96) Este comentario y comparacioacuten deberiacutea ampliarse para que tambieacuten incluyese a laquola historia literaria varonilraquo

Dontildea Luisa fue defensora de la labor que la Inquisicioacuten estaba realizando en la laquolim-piezaraquo de mujeres laquosoldados del demonioraquo que existieron en algunas provincias espa-ntildeolas en aquel tiempo Muchas de las mujeres que combinaban la magia con los po-deres curativos fueron condenadas no solamente por hombres de la Inquisicioacuten sino tambieacuten por mujeres de todas las clases sociales como es el caso de Luisa de Padilla condesa de Aranda En su obra Elogios de la verdad e invectiva contra la mentira preveniacutea contra aquellos que practicaban artes en contra de la religioacuten cristiana La magiacutea negra seguacuten Padilla era la causante de que muriesen casi tantas personas como otras causas naturales habieacutendose descubierto hasta seis mil brujas en Vizcaya y Guipuzcua con-fesando una mujer de un pueblo pequentildeo haber matado con su laquomagiaraquo a ochocientas personas (Perry 31) Eran estos laquomales de ojoraquo y maldiciones seguacuten la autora las causas de que se secasen los pechos de las madres lactantes que se separasen las parejas casa-das y que abortasen las embarazadas (Perry 31)

Si se tiene en cuenta que dontildea Luisa estuvo emparentada con la maacutes rancia aristocra-cia de su tiempo o lo que es lo mismo con algunos de aquellos que en cierta manera dirigiacutean los destinos de Espantildea en aquella eacutepoca (Duques de Lerma Duque de Uceda Marqueacutes de Cueacutellar Conde de Santa Gadea Marqueacutes de Belmonte por citar algunos) se comprenderaacute mejor su identificacioacuten con una institucioacuten que en teoriacutea velaba por la salvaguarda de los valores laquoeternosraquo de una Espantildea destinada a ser la campeona del ca-tolicismo durante los siglos XVI y XVII El padre de dontildea Luisa fue don Martiacuten de Padilla y Manrique extraordinario militar que proboacute su valor contra enemigos moriscos ingle-ses holandeses piratas berberiscos y el renegado genoveacutes Muley Faxad Fue veterano de la batalla de Lepanto donde apresoacute a cuatro galeras y acompantildeoacute con su escuadra a la reina Dontildea Margarita de Austria cuando vino de Geacutenova en 1598 laquoHabiacutea obtenido a 24 de julio de 1587 el tiacutetulo de Conde de Santa Gadea y en 1596 el de Capitaacuten General de la Armada del mar Oceacuteanoraquo (Serrano y Sanz 27095-96)

Por otra parte tambieacuten se sabe que dontildea Luisa participoacute directamente y desde tem-prana edad en la praacutectica de algunas actividades intelectuales como la historia y la arqueologiacutea a la vez que dedicaba su tiempo a virtudes cristianas como la caridad y el socorro de los necesitados (Serrano y Sanz 270 97) Resulta mucho maacutes faacutecil compren-

168 JUAN FRANCISCO MAURA

der la postura ideoloacutegica de esta gran mujer si tienen en cuenta ademaacutes de los factores antes mencionados otros tantos de caraacutecter biograacutefico concernientes a su educacioacuten y matrimonio

Otra escritora fue la mexicana dontildea Mariacutea Casilda Pozo natural de Temestla (Meacutexi-co) Nacida en el mes de abril de 1682 dejoacute escrita su biografiacutea en 16 cuadernos el ma-nuscrito original se encuentra en la biblioteca del colegio de San Gregorio de Meacutexico Fue su confesor el jesuiacuteta Domingo Quiroga que fue quieacuten la incitoacute a escribir su obra (Serrano y Sanz 270 137) Sor Juana de San Antonio aparece a principios del siglo XVII formando parte de un grupo de religiosas espantildeolas que fueron a Manila por la ruta de Meacutexico Ademaacutes de distinguirse por sus cualidades personales su obra interesa por ofrecer informacioacuten testimonial y costumbrista acerca de la forma de vestir de chinos y japoneses (Serrano y Sanz 270 225)

Otra monja esta vez ecuatoriana fue Gertrudis de San Ildefonso Nacida en 1652 profesoacute su vocacioacuten en el convento de Santa Cruz de Quito dejando escrita su vida por mandato de su confesor el padre Martiacuten de la Cruz el cual hizo una biografiacutea laquoen tres gruesos voluacutemenesraquo Gertrudis de San Ildefonso murioacute en 1709 (Serrano y Sanz 270 300) en olor de santidad

Sor Mariacutea Ana Agueda de San Ignacio nacioacute el 3 de marzo de 1695 en la dioacutecesis de la puebla de los Angeles en un rancho del lugar de Santiago Tecaliacute (Serrano y Sanz 270300) Esta monja mexicana escribioacute varias obras durante su vida conventual a lo largo de la cual desempentildeoacute el cargo de priora por muchos antildeos Entre sus obras todas de caraacutecter piacuteo y de laquoamor divinoraquo escribioacute un curioso y laquocopiosoraquo tratado de la Leche virginal de la Soberana Madre de Dios El padre Fr Juan de Villa Saacutenchez hace el siguiente comentario al respecto laquoen que hablando primero en sentido natural de los beneficios que debemos a Nuestra Sentildeora pasa a tratar en sentido miacutestico y alegoacuterico enten-diendo en la leche la doctrinaraquo (Serrano y Sanz 270301) Mexicana fue tambieacuten Sor Petronila de San Joseacute que ejercioacute como abadesa del Real monasterio de Jesuacutes Mariacutea de la ciudad de Meacutexico Escribioacute Vidas de varias religiosas ejemplares obra que tiene su im-portancia ya que al parecer laquoDe esta obra se sirvioacute D Carlos de Siguumlenza y Goacutengora para escribir su Parayso Occidental (Meacutexico 1684) seguacuten eacutel mismo declara en el proacutelogo diciendo lsquoa quien si hay algo bueno en esta historia se le debe todorsquoraquo (Serrano y Sanz 270 354) Menos conocida fue su compatriota Sor Luisa de Santa Catalina natural de Xacona laquopueblo situado en las inmediaciones de Zamora (Meacutexico)raquo siendo bautizada en 1682 Escribioacute Cartas espirituales a su confesor el P Juan Loacutepez de Aguado (Serrano y Sanz 270 361-62)146

Todos estos escritos la mayoriacutea de ellos ignorados por el gran puacuteblico tienen la im-portancia de darnos una perspectiva diferente En otras palabras ensentildearnos la maacutes refinada sensibilidad de muchas mujeres que permanecieron y en su mayoriacutea siguen permaneciendo a laquooscurasraquo de una eacutepoca tan rica de la literatura espantildeola como fue el Siglo de Oro Este siglo fue tambieacuten en su dimensioacuten literaria y artiacutestica patrimonio de la mujer

146 Para profundizar en muchas de estas escritoras hispano-americanas la consulta de la Biblioteca Hispano-Americana de Beristain de Souza resulta de capital importancia

169ESPANtildeOLAS DE ULTRAMAR EN LA HISTORIA Y EN LA LITERATURA

Sor Nada ardores divinos de una monja adolescente escritos ineacutedi-tos de una recieacuten profesa del siglo XVI147

iexclQueacute encantadores son tus amores hermana miacutea espo-sa iexclQueacute deliciosos son tus amores maacutes que el vino Y el aroma de tus perfumes es mejor que el de los baacutelsamos Miel virgen destilan tus labios esposa miel y leche hay en tu lengua y el perfume de tus vestidos es como aroma de incienso (Cantar de los Cantares 4 10-11)

Sor Nada llamada asiacute por humildad seguacuten dice el Indice de manuscritos de la Biblio-teca Nacional de Madrid es uno de los ejemplos maacutes desconocidos e interesantes que tenemos de la poesiacutea y prosa amoroso-religiosa del siglo XVII Hasta la fecha nunca se habiacutea publicado su obra e incluso hasta el antildeo 1995 para mi sorpresa no habiacutea copias microfilmadas de sus manuscritos en la Biblioteca Nacional Serrano y Sanz en su libro Apuntes para una Biblioteca de Escritoras Espantildeolas hace una escueta y pasajera mencioacuten de esta mujer y de su obra (68-69) siendo eso todo lo que hasta ahora se sabiacutea de ella Sus escritos consisten en los siguientes manuscritos

1 laquoEn queacute consiste un verdadero amor de Diosraquo 9 hojas uacutetiles en 4ordm letra del siglo XVII Biblioteca Nacional de Espantildea Manuscrito 1295926

2 laquoPintura del Propio Amorraquo laquoPintura del propio Amorraquo 10 hojas uacutetiles en 4ordm letra del siglo XVII Biblioteca Nacional de Espantildea Manuscrito 1295927

3 laquoEsplicacioacuten sobre en queacute consiste la paz del Almaraquo laquoQuartillas aacute un Alma que padece soledad interiorraquo 7 hojas uacutetiles en 4ordm letra del siglo XVII Biblioteca Nacio-nal de Espantildea Manuscrito 1295828

En cuanto a su persona soacutelo se nos dice que laquose encubrioacute con este seudoacutenimo laquoSor Nadaraquo Esta monja desconocida de origen hispanoamericano posee toda la frescura e ingenuidad de una joven apasionada metida por vocacioacuten u obligacioacuten a ejercer la profesioacuten maacutes comuacuten para mujeres de cierta clase social de su tiempo En sus liacuteneas podemos encontrar un misticismo simple incluso en algunos momentos infantil pero a su vez lleno de una fuerza y sensualidad interior poco comuacuten en escritos de este geacute-nero que desborda los liacutemites del laquoamor divinoraquo a traveacutes de los diaacutelogos entre el Alma y el Esposo Sor Nada consigue proyectar su amor a Dios maacutes allaacute de una experiencia romaacutentica Su experiencia es sincera y genuinamente miacutestica trascendiendo la imita-cioacuten o la propia creacioacuten poeacutetica ficcionalizada (Hatzfeld 30) Algunos pasajes son de un

147 Veacutease mi artiacuteculo Sor Nada ardores divinos de una monja adolescente escritos ineacuteditos de una monja profesa del siglo XVIIraquo Espeacuteculo Revista de estudios literarios 26 (2004) 1-10 Universidad Complutense de Madrid http wwwucmesinfoespeculonumero26sornadahtml

170 JUAN FRANCISCO MAURA

alto contenido eroacutetico con sustantivos y metaacuteforas que recuerdan la maacutes iacutentima unioacuten amorosa en unos casos y el tierno amor maternal en otros

[T]e miro Jesus mio desnudo a las inclemencias del tiempo y ardien-do en puro fuego de Amor por la salud de las Almas y me ensentildeas a que te ame con todo mi corason y puresa de espiritu No atendiendo ni buscando umanos intereses ni a solisitar consuelos ni regalos espi-rituales que suelen empantildear la puresa del noble corason No mi Jesus amable pues antes me ensentildeaste tu puro Amor que desnudo sean [sic] de encaminar mis passos desde el pesebre asta la cuna en donde te miro tan desnudo como el pesebre y todo Sentildeor por mi Amor (Mss 12959 26 hoja 1 v)

El manuscrito (12959 27) de la mencionada serie de tres contiene algunas correccio-nes quizaacute hechas por el confesor o quizaacute por ella misma cuando se dirige con excesiva familiaridad y arrebatado fervor a su Amado148 He escogido el manuscrito (12959 Caja 28) en primer lugar por ser el ejemplo maacutes representativo de su poesiacutea y prosa En este manuscrito encontramos de forma maacutes directa que alegoacuterica toda la frescura de un diaacutelogo entre Jesuacutes y el alma que raya como diriacutea Cervantes laquoa la llana y sin rodeosraquo (667 lib 2 cap 38) con el doloroso y a veces desesperado deseo de la entrega y la unioacuten final con el Amado La ortografiacutea no ha sido corregida respetaacutendose el texto ori-ginal149 Veamos el siguiente fragmento

Mira que te amo con Amor de padre y con Amor de esposo el mas fino y puro enamorado que no tan solo me presio de darte mi mano sino tambien todo mi cuerpo y sangre para que con mi pan de vida te sustentes y te regales a tus anchuras y que con mi propio espiritu vivas en paz como tu lo deseas y que mis amores sean unico alivio en tus trabajos en esta mortal vida pues si esto es asi y sabes que muero por darte vida dime esposa mia de que te fatigas Dame querida tus bras-sos y dime si me amas como yo te amo (Hoja 4)

148 La antologiacutea de Promis ha procurado insertar entre los textos antoloacutegicos algunos que se refieren a la es-critura de mujeres fundamentalmente de aquellos generados en el interior de los espacios conventuales Estos textos se fundan como laquohistorias de vidasraquo y responden casi siempre a los requerimientos de los confesores de las monjas coloniales En este sentido resulta valiosiacutesima la incorporacioacuten de la llamada Relacioacuten autobiograacute-fica de Sor Ursula Suaacuterez como una muestra significativa de la escritura monjil entendida en esta eacutepoca (como tambieacuten en la tradicioacuten europea medieval) inserta en las denominadas laquolabores de manoraquo de las religiosas ya que el texto escrito por mandato se convertiacutea en una suerte de entramado o tejido linguumliacutestico es decir en un nuevo bordado que la mayor parte de las veces el confesor convertido en censor iba haciendo tachando y enmendando En la antologiacutea Promis agrega un texto de Sor Tadea Garciacutea de la Huerta titulado Relacioacuten de la inundacioacuten que hizo el riacuteo Mapocho de la ciudad de Santiago de Chile en el monasterio de Carmelitas titular de San Rafael el diacutea 16 de junio de 1783 se trata de un poema tipo romance escrito en versos octosilaacutebicos y que da cuenta de lo sucedido ese diacutea en el convento (Resentildea de la literatura del reino de Chile de Joseacute Promis Eddie Morales Pintildea httpwwwupaclpublicaciones2002literatura_promishtm)

149 Son frecuentes las faltas ortograacuteficas Una de ellas es el uso constante del seseo La ausencia de acentua-cioacuten y puntuacioacuten exceptuando alguacuten punto o coma arbitrario no seguido casi nunca de mayuacutescula inicial lo mismo que el uso igualmente aribitrario de la h o de b v r q g j m n x etc No olvidemos de la misma forma la laxitud linguumliacutestica existente en el siglo XVII (no sabemos a queacute parte de eacuteste pertenece el manuscrito) asiacute como la joven edad de la monja

171ESPANtildeOLAS DE ULTRAMAR EN LA HISTORIA Y EN LA LITERATURA

Los versos del presente manuscrito poseen la misma fuerza que tiene su prosa Con una estructura estroacutefica indefinida estaacuten aparentemente corregidos por alguien que tu-vo la oportunidad de conocer personalmente a la autora Muy probablemente se trate del padre al que hace referencia al principio del primer manuscrito laquoMandame el Pd que le declare en que consiste un verdadero amor a Diosraquo a continuacioacuten continuacutea con su caracteriacutestica humildad laquo[O]bedesere y dire lo q Dios me inspire segun mi rudesa y simplisidadraquo (Mss 12959 26) En cuanto a la fuerza pasional de esta joven observamos con cierta tristeza coacutemo aparece sublimada en sus escritos con toda la enegiacutea de una joven mujer llena de intensidad y vida pero encerrada en los liacutemites de un convento Veamos un ejemplo en donde responde el Alma en los siguientes versos

O mi enamorado Jesus O mi dulse y tierno amanteO alegria de los sielos O dulse Jesus amable

(Toda Sentildeor me derrito toda Sentildeor me desagoy quiero vivir por ti ea sentildeor abrasadme) [Tachado en el original]

Toda Sentildeor me derrito toda Sentildeor me desagoy quiero morir por vos ea Sentildeor que ya acabo

Ya tus amores me llaman ya tus perfumes me traencon suspiros y agonias Sentildeor hasta que te alcanse

O mi Jesus amoroso no puedo mas dilatarmeya la pasiensia me falta dulse Jesus abrasadme

(No puedo vivir sin vos no puedo mas dilatarmeya la pasiensia me falta dulse) [Tachado en el original]

No puedo vivir sin vos mi dulse Jesus amablepues me teneis echisada siendo mi esposo y mi Padre

Ay que me abraso Ay que me quemo del Amor deJesus nasareno como no tocan y tantildeen a fuego150

Estos versos llenos de arrebato sublimado conectan con toda la tradicioacuten miacutestica es-pantildeola que se remonta a Ramoacuten Llul y que culmina en el maacutes universal de nuestros

150 En toda la fuerza y simbologiacutea del amor maacutes iacutentimo del maacutes alto y sublime placer de la unioacuten de los amantes tal como lo encontramos en el Cantar de los Cantares y en San Juan de la Cruz Leemos en la Biblia

Ya me he quitado la tuacutenica iquestCoacutemo volver a vestirme Ya me he lavado los pies iquestCoacutemo volver a ensuciarlosMi amado metioacute su mano por el agujero (de la llave) y mis entrantildeas se estremecieron por eacutel Me levanteacute para abrir a mi amado Mis manos destilaron mirra y mis dedos mirra exquisita en el pestillo de la cerradura (5 3-5)

Nos ocurre lo mismo con San Juan de la Cruz en su insuperable poema laquoLlama de amor vivaraquo

iexclOh cauterio suaveiexclOh regalada llagaiexclOh mano blanda iexclOh toque delicadoque a vida eterna sabey toda deuda pagaMatando muerte en vida la has trocado

172 JUAN FRANCISCO MAURA

miacutesticos San Juan de la Cruz Esta tradicioacuten se extiende hasta finales del siglo XVII esto es hasta los finales del Barroco siendo un poco maacutes tardiacuteo en la Ameacuterica espantildeola Sin tener como propoacutesito discutir en el presente trabajo a queacute corriente miacutestica pertenece la obra de Sor Nada es necesario resaltar no obstante el hecho de que estaacute escrito por una mujer y ademaacutes de tierna edad El manuscrito 12959 Caja 26 termina con estas pa-labras laquo[T]odas estas boverias escrivi por entretenimiento siendo resien profesa en la religion Sor Nadaraquo Mas no por la juventud de su autora los escritos dejan de tener lo-gradas metaacuteforas imaacutegenes y siacutembolos sacados de la naturaleza La alegoriacutea de la unioacuten matrimonial poseeacute el fuego liacuterico de la maacutes apasionada de las relaciones amorosas vivi-ficada por perfumes flores insectos animales escarchas nieves o abrojos Por lo tanto aunque la narracioacuten destile cierta ingenuidad no carece por ello de un vocabulario rico con el sabor popular de la poesiacutea de los cancioneros y romances de tradicioacuten renacen-tista No ha sido otra mi intencioacuten que la de rescatar del olvido unos escritos en prosa y en verso llenos de frescura y espontaneidad que nos muestran la pasioacuten con que la joven novicia se laquoentrega en cuerpo y almaraquo a los menesteres de su profesioacuten guiada por un padre espiritual en esos primeros antildeos de formacioacuten Esta ha sido la razoacuten por la que presento a continuacioacuten el citado manuscrito en su totalidad

Sor Nada (Mss 1295928)

laquoEsplicacion sobre en que consiste la paz del AlmaraquolaquoQuartillas a un Alma que padece soledad interiorraquo

[7 hojas utiles en 4ordm letra del siglo XVII]

+

Esplicacion sobre en que consiste la paz del Alma

Pareseme segun mi rudo entender que la verdadera paz del Alma con-siste en una muy pura y buena consiencia en un corason liso y bien intensionado en una verdadera rectitud de espiritu en el qual el Alma procura bolar a Dios sin jamas detenerse a respetos umanos ni reparar en que me diran ni de que me censuraran sino me apresuro a seguir a unos entenderes y pareseres dorados en los quales pretende el mundo engantildear y ensuciar si se puede la puresa de un corason unicamente de Dios y de su Santa ley y se lo conserva cristalino con la divina asis-tencia de la gracia y comprendido de su Amor y temor siguiendo la luz divina de tan amante Sentildeor Dios y ombre verdadero con que este ilustrado corason ni se altera ni se mueve por los disfrasses dorados que ase el mundo y sus moradores mayormente con falssas amistades aunque con ellos muestre buena intension Con la misma grasia y luz de Dios conose el buen corason estos disfrasses que le ase el mundo y se retira de todo con espiritu y valor esto sin la menor alterasion sino que en suma paz se retira a buscar a Dios dentro de su mismo corason

173ESPANtildeOLAS DE ULTRAMAR EN LA HISTORIA Y EN LA LITERATURA

y se abrasa con su pura verdad en la qual se le descubren mil interio-res secretos tan solidos puros y verdaderos que la misma Alma queda abismada y de puro grandes no los puede bien comprender ni esplicar pero estos mismos secretos divinos le sirven de espuelas para no solo correr sino bolar con pies de plumas en seguimiento de su bien ama-do Jesus y como este soberano Sentildeor es tan amante de sus espossas las Almas luego que la ve bolar con pies de plumas la sale al encuen-tro en despoblado campo que se deve de llamar Campo de Amor de Dios y el mismo Sentildeor se viene a las manos por ser Dios que nos ama con Amor infinito de Padre benigno y amoroso con que asiendose en contra deso este divino enamorado en lo interyor de el Alma que le busca con ansias de servirle y amarle y en aquella soledad traban una conversasion amorosa y sensilla como la pluma simple de quien esto escrive

Divino enquentroDios y el Alma en la soledad

O Soberano Principe de la paz dise el Alma tus perfumes me traen a ti bolando porque alla en el mundo y sus valedores me pretendian engantildear y entretenerme con pegaminossas amistades que facilmen-te me pudieran envenenar y matarme apartandome de ti Mi dulse Jesus amable mi Redentor Soberano que con tantas ansias me sales al enquentro como siervo [ciervo] erido de mis Amores los quales tu Amor me ofrese para que con tu mismo Amor te ame y te sirva en paz sin perturbarme ni contristarme ni cansarme de padeser pasando si se ofrese por escarchas nieves espinas ni abrojos ni por otros diverssos trabajos ni piedras de contradision que tu me puedes permitir pues por mas que el mar se levante con sus ferosses olas contra mi ni piedras se me tiren al rostro en todo Sentildeor me quieres con serenidad pasifica sin la menor perturbasion Todo Sentildeor quieres que lo tome con Serenidad de espiritu y asi vengo a ti bolando para que mejor me ensentildees a vivir segun las leyes de tu noble condision que me son muy agradables por mas que el mundo me las despresie por segir sus vanidades y torsidas intensiones con apariensias de bien y con este engantildeo y bien me quie-ro mas a mi que no a mi proximo veo que segun mi pareser se pierden muchas Almas y tambien de aquellos que se depresian y pasan por muy espirituales Con que me paresen pocos los que llegan a padeser con desnudes151 de espiritu por tu purisimo Amor y me parese essas se quedan muy atrasadas en la virtud por el peligro de bolver muy atras el paso de modo que se pueden despentildear y pereser en su misma desgra-sia ya por soberbia o por otras enfermedades que se les pega al corason y asi lo pasan como siegos ignorantes sin advertir en sus peligros

151 La letra en cursiva es miacutea

174 JUAN FRANCISCO MAURA

este aquerdo Sentildeor y otros que tu verdad me ensentildea me ase venir uyendo de las paredes del mundo y me vengo a ti Dios mio bolando con las dos Alas del Amor y temor que tu mismo Amor me ofrese tan de gracia y tan de grado que no se duentildeo mio con que lo responder a tan soberano beneficio y finesa de tus entrantildeas de Amorvengo Sentildeor y esposo mio unicamente a descansar en ti pues los peli-gros del camino me an puesto en mucho sobresalto temiendo el per-derte y sin ti perderme para siempre por una eternidad sin fin pues deseo amado mio ganarme ganandote a ti y vivir en ti aora en vida y despues eternamente y estos cuidados me traen fatigada molida y cansada y no podre tener alivio y descanso sino viendome entre tus brassos aunque sea estando en cruz pues ese es el fin de mis deseos vivir y morir en ti ablame mi cordero manso y ensentildeame a que ver-daderamente te ame como fiel esposa ea mi caro amigo dame la ma-no pues sabes Amor mio que en mi no ay mano sin tu misma mano y asi mi Dios y Sentildeor mi Principe Soberano con umilde rendimiento y deseos de alcansarte te suplico me des la mano y me consueles en estos mis trabajos Deseo Sentildeor vivir en paz y los malos amores de mi Naturaleza flaca no me dejan detentar y no quieren por mi desgrasia atropellar con las leyes de tu Amor ni quisiera perturbar mi corason quando me veo con un torvellino de olas y contratiempos que a menu-do me suelen sercar pero si tu Sentildeor me das la mano nada temo sino que me aseguro y vivire en paz sin que me fatiguen los contratiempos pues mi mano en la tuya y mi espiritu en el tuyo por mas borrascas que me envistan no seran bastantes para rendir mi voluntad a la suya bien si para pronunsiar un fiat que resuene bien atras en tus oidos y que en medio de mis fatigas me ponga a cantar tus divinas misericor-dias hea Sentildeor ya pretendo serrar mis labios por no desir mas bove-rias y deseo Sentildeor oir tus palabras de vida eterna abla Sentildeor que tu sierva oye con atension y cuydado mira mi Dios que se me ase tarde y espero con prisa deseando saborearme y aprovecharme de los ecos de tu Santa dotrina pues todas tus palabras saben a eterna vida callen pues mis sentidos y potensias y todo se ponga en paz pues mi dulse y soberano Sentildeor no se escusara de ablar me aun que en mudo silensio hea mi gran Prinsipe de la paz ablame que tus puros amores me traen perdida por estos asperos montes y mis cortos pasos no te pueden dar alcanse mirame mi Dios a tus pies postrada como un vil gusano y me-nor ormiga de la tierraabla Jesus y dise a su esposa el Alma querida esposa mia que me pides y por que te muestras tan fatigada y mal sufrida no vives como corde-rita del campo buscando de mis pechos el sustancial pasto mi Amor no te sustenta y mi grasia te promete eterna vida pues dime amada de que te fatigas y te muestras mal sufrida mira que te amo con Amor de padre y con Amor de esposo el mas fino y puro enamorado que no tan solo me presio de darte mi mano sino tambien todo mi cuerpo y

175ESPANtildeOLAS DE ULTRAMAR EN LA HISTORIA Y EN LA LITERATURA

sangre para que con mi pan de vida te sustentes y te regales a tus an-churas y que con mi propio espiritu vivas en paz como tu lo deseas y que mis amores sean unico alivio en tus trabajos en esta mortal vida pues si esto es asi y sabes que muero por darte vida dime esposa mia de que te fatigas Dame querida tus brassos y dime si me amas como yo te amoResponde el Alma152 Tu mi Dios sabes si yo te amo pues de mi solo se que mis deseos y ansias buelan a ti mas no alcanso a saber si te amo como tu de-seas ser amado y como desconfio tanto de mi y de mis prosederes falssos temo Dios mio perderme y perderte y asi Sentildeor pues no desechas mis Amores y te muestras tan fino en amarme te pido me ensentildees a vivir segun las leyes de tu pura verdad y fina condisionhija mia dise Dios la prueva de un verdadero Amor consiste en sufrir callar y padeser por mi unico Amor y en todo seguir mis pasos sin ja-mas retroseder por mas fragoso que se muestre el camino pues nunca seran tantas las espinas las escarchas ni las nieves ni los vientos bo-rrascosos que te se ofrescan pasar por mi Amor como los que mi tierno y desinteresado Amor paso por ti y siempre con mis pies descalssos y asi hija y esposa mia muestrate costante en seguir lo perfecto de mis passos pues mi braso fuerte sera en ti y peleara por ti y te sera el todo en tus nesesidades y mi Amor te convertira en dulse y suave lo amargo y molesto a la condision de la carrne

Responde el Alma

O mi enamorado Jesus O mi dulse y tierno amanteO alegria de los sielos O dulse Jesus amable

(Toda Sentildeor me derrito toda Sentildeor me desagoy quiero vivir por ti ea sentildeor abrasadme) [Tachado en el original]

Toda Sentildeor me derrito toda Sentildeor me desagoy quiero morir por vos ea Sentildeor que ya acabo

Ya tus amores me llaman ya tus perfumes me traencon suspiros y agonias Sentildeor asta que te alcanse

O mi Jesus amoroso no puedo mas dilatarmeya la pasiensia me falta dulse Jesus abrasadme

(No puedo vivir sin vos no puedo mas dilatarmeya la pasiensia me falta dulse) [Tachado en el original]

No puedo vivir sin vos mi dulse Jesus amablepues me teneis echisada siendo mi esposo y mi Padre

152 La aparicioacuten de una mayuacutescula al principio de una oracioacuten es algo totalmente arbitrario en este ma-nuscrito dada la libertad ortograacutefica de la autora Como se puede observar en la mayor parte de las veces no es el caso

176 JUAN FRANCISCO MAURA

Ay que me abraso Ay que me quemo del Amor deJesus nasareno como no tocan y tantildeen a fuego

Responde Jesus Hija mia tus simples vozes oygo y aunque resuenan bien a mis oidos pero te deseo mas mansa y pasifica en tus fervores ya sabes que no siempre as de vivir en mantillas ni a los pechos de tu Madre por que es rason que padescas con espiritu fuerte como mu-jer valerosa por que a una esposa del Rey soberano y prinsipe de la paz no le estan bien chiquerias ni fervores de nintildea malcriada y ya es ora que la destete su Madre la Naturaleza y que empesando su nueva vida camine con el favor de mi grasia sigiendo mis passos de eterna vida esto con sus pies descalssos segun mis leyes de Amor puro y desinteresado lo tienen ordenado153 y vivir en paz como lo deje en-cargado a mis apostoles Santos repitiendoles varias vezes Vivir en pas y caridad esto es un vivir en Dios y Dios en el Alma y asi hija mia el Alma que vive en paz vive en mi Como mis cortesanos en el cielo y pues me pides que te ensentildee a vivir segun las leyes de mi condision Repito el desir que te debes mostrar sufrida en todo tiempo y estado sin permitir en tu corason que ni aun los fervores se adelanten con estremos ni ademanes sino atiende y aprende de mi purisima Madre pues siempre la veras si bien lo consideras que mientras vivio en el mundo en todos sus trabajos se mostro firme fuerte costante como piedra diamante Pues mirandome nintildeo entre sus brasos desnudo en el pesebre desnudo y crusificado en los brassos de una cruz En estos y otros passos no se mudo su rostro sino que en suma serenidad y pasifico corason toda se sacrificaba enteramente en los brassos de mi Amor y rendido su corason y voluntad en la de mi eterno Padre por ejemplo te la doy y deseo que aprendas de sus nobles calidades pues te aseguro carisima que las leyes de mi condision y pura verdad todo lo allaras enserrado en el corason de mi purisima Madre sedle fiel y descansaras en paz

+

Quartillas a un alma que padese soledad interior

1Un Alma afligida y tristese ve en un campo desiertay en el su esposo la tieneAtormentada y sedienta

153 Es a traveacutes de estas liacuteneas lo que hace suponer que la autora de este diaacutelogo amoroso entre el Alma y Je-suacutes es novicia esto es laquoque estaacute empesando su nueva vidaraquo En las mismas liacuteneas una vez maacutes se hace alusioacuten al laquodesteteraquo de su vida civil laquoa una esposa del Rey soberano y principe de la paz no le estan bien chiquerias ni fervores de nintildea malcriada y ya es ora que la destete su Madre la naturalesaraquo (fol 5)

177ESPANtildeOLAS DE ULTRAMAR EN LA HISTORIA Y EN LA LITERATURA

2Pendiente se ve en el AyreSolo un hilo la sustentasin tocar el pie en el sueloporque del no tome tierra

3Mirandola esta yto a ytoaquel sol que la atraviesay la enviste con sus rayosmas ella no pestantildeea

4Como sigarra padese y como a tal se atormentabatiendo sus mismas Alasy el corason se atraviesa

5Con penas sustos temoresquando se mira assi mesmasin tener valor en nadaporque es la misma flaquesa

6Pero el Amor de su esposotoda su atension le llevay la pone en un abismopero cubierto en tiniebla

7Desea dar algun bueloy subir con ligeresapero se mira travadacon una fuerte cadena

8Clama suspira y padeseMas del todo se sujetaRindiendo su voluntadA la divina clemencia

9Los enemigos del AlmaCruelmente le asen guerray ella aunque firme y constantelos reselos la atormentan

178 JUAN FRANCISCO MAURA

10de todos modos padeseaunque gosa la asistensiadel divino esposo amadoque en su interior se recrea

11Solo de verla penary con verla tan serenadise resibe mil gustosde su sigarra pequentildea

12Le sabe el mundo a mil yelesy su trato le atormentaviendo en el mil falsedadesque todas saben a tierra

13Para poderse librardeja de correr y buelacon las Alas del Amory el mismo Amor se la lleva

Una vida dedicada a un amor divino un amor que le haraacute llenar un buen nuacutemero de cuartillas dedicadas a tan alta empresa Se desconoce si la vocacioacuten de Sor Nada con-tinuoacute con tanta intensidad el resto de sus diacuteas Ciertamente la vida en el covento no era faacutecil En algunos casos la experiencia era traumaacutetica incluso fatal para algunas de las adolescentes de la Ameacuterica Espantildeola Las reglas del claustro eran severas por varias razones Estas joacutevenes si no teniacutean el permiso de la superiora no podiacutean recibir visitas no podiacutean volver a sus casas su correspondencia era censuraba y no podiacutean salir del periacutemetro conventual Igualmente se levantaban antes del amanecer para oir misa tra-bajaban el resto del diacutea y lo maacutes interesante es que muchas veces esta vida era aceptada por muchas

Page 35: Tercera parte: Mujeres en la vida intelectual - …parnaseo.uv.es/Editorial/Maura/TerceraParte.pdf · La Biblia, por su parte, hace repetidas menciones de la mujer y sobre el comporta-

165ESPANtildeOLAS DE ULTRAMAR EN LA HISTORIA Y EN LA LITERATURA

bergantines con tanto amor como si fueran sus propios hijos Y como llegamos a una generacioacuten de indios que se llaman tinbues sentildeores de mucho pescado de nuevo los serviacuteamos en buscarles diversos modos de guisados porque no les diese en rostro el pescado a causa de que lo comiacutean sin pan y estaban muy flacos Despueacutes determinaron subir el Paranaacute arriba en demanda de bastimento en el cual viaje pasaron tanto trabajo las desdichadas mujeres milagrosamente quiso Dios que viviesen por ver que en ellas estaba la vida de ellos porque todos los servicios del naviacuteo los tomaban ellas tan a pechos que se teniacutea por afrentada la que menos haciacutea que otra sirviendo de marear la vela y gobernar el naviacuteo y sondar de proa y tomar el remo al soldado que no podiacutea bogar y escotar144 el naviacuteo y poniendo por delante a los soldados que no se desanimasen que para los hombres eran los trabajos verdad es que a estas cosas ellas no eran apremiadas ni las haciacutean de obliga-cioacuten ni las obligaba si solamente la caridad Asiacute llegaron a esta ciudad de la Asuncioacuten que aunque ahora estaacute muy feacutertil de bastimentos en-tonces estaba de ellos muy necesitada que fue necesario que las muje-res volviesen de nuevo a sus trabajos haciendo rosas con sus propias manos rosando y carpiendo y sembrando y recogiendo el bastimento sin ayuda de nadie hasta tanto que los soldados guarecieron de sus fla-quezas y comenzaron a sentildeorear la tierra y adquirir indios e indias de su servicio hasta ponerse en el estado en que ahora estaacute la tierra He querido escribir y traer a la memoria de V A para hacerle saber la ingratitud que conmigo se ha usado en esta tierra porque al presente se repartioacute por la mayor parte de los que hay en ella asiacute de los anti-guos como de los modernos sin que de miacute y de mis trabajos se tuviese ninguna memoria y me dejaron de fuera sin me dar indio ni ninguacuten geacutenero de servicio Mucho me quisiera hallar libre para me ir a presen-tar delante de VA con los servicios que a SM he hecho y los agravios que ahora se me hacen mas no estaacute en mi mano porque estoy casada con un caballero de Sevilla que se llama Pedro de Esquivel que por servir a SM ha sido causa que mis trabajos quedasen tan olvidados y se me renovasen de nuevo porque tres veces le saqueacute el cuchillo de la garganta como allaacute VA sabraacute A que suplico mande me sea dado mi repartimiento perpetuo y en gratificacioacuten de mis servicios [en el origi-nal del AHN Diversos doc 141 dice ademaacutes mande que sea proveydo mi marido de alguacuten cargo conforme a la calidad de su persona pues el de su parte por sus servicios lo merece] lo merece Nuestro sentildeor acre-ciente su Real vida y estado por muy largos antildeos De esta ciudad de la Asuncioacuten y de julio 2 1556 antildeosServidora de V A que sus Reales manos besa

Dontildea Isabel Guevara

144 Sacar agua de un riacuteo acequia o presa

166 JUAN FRANCISCO MAURA

Sobremdash A la muy alta y muy poderosa sentildeora Princesa dontildea Joana Gobernadora de los reinos de Espantildea etc ndash En su Consejo de Indias (Isabel de Guevara 619-21)

Iroacutenicamente la carta teniacutea que llegar a manos de la desdichada heredera del trono de Castilla e hija de los Reyes Catoacutelicos Juana laquola Locaraquo que habiacutea muerto el antildeo an-terior Son profeacuteticas las palabras de esta mujer no soacutelo porque sus hechos personales quedasen en el olvido sino porque incluso se ha borrado la historia de las mujeres en el Nuevo Mundo negando su presencia Por lo menos Isabel Guevara tuvo acceso a una pluma iquestCuaacutentas seriacutean las que ni siquiera sabriacutean escribir

Otra contemporaacutenea fue dontildea Leonor de Iciz que vivioacute durante la segunda mitad del siglo XVI Interesa sobre todo por los sonetos que escribioacute en elogio de Ercilla soldado que participoacute en la conquista de Chile y que se inmortalizoacute con su obra La Araucana (Serrano y Sanz 269 534) Lo mismo hizo Dontildea Bernarda Lintildeaacuten en 1610 autora de otro soneto en memoria del capitaacuten Gaspar Peacuterez de Villagraacute que participoacute en la conquista de Nuevo Meacutexico (Serrano y Sanz 270 14) Los escritos de estas mujeres tratan de de dos de las eacutepicas maacutes dramaacuteticas de la conquista

En el Peruacute y en pleno siglo XVII aparece otra fundadora de conventos Sor Bernardina de Jesuacutes que ademaacutes fue comparada con Santa Teresa por la semejanza de sus laquocartasraquo con las de la santa de Avila Fue fundadora del convento de Tacunga en Quito maacutes tarde destruiacutedo por un terremoto Dice Serrano y Sanz con respecto a su biografiacutea un tanto legendaria que fue carmelita descalza de Lima y hermana de Dontildea Mariacutea Benavides y Esquivel abuela de D Pedro de Peralta Barnuevo (Serrano y Sanz 269 553) Dicen que esta santa se alimentoacute durante treinta antildeos con laquochochos y caacutescaras de naranja hecho tan raro como increiacuteble Cuando fallecioacute reparaban las monjas en ponerle una vara de azucenas porque habiacutea sido casada y aquellas flores aparecieron milagrosamente sobre el cadaacuteverraquo (Serrano y Sanz 269 553)

Otra limentildea del primer cuarto del siglo XVII con reputacioacuten de santa fue Dontildea Luisa Melgarejo En este caso no se trata de una religiosa de oficio sino de la mujer del doctor Juan de Soto La uacutenica diferencia es que dontildea Luisa al parecer teniacutea laquovisiones y reve-lacionesraquo lo que debioacute poner nervioso a maacutes de un miembro del tribunal del laquoSanto Oficioraquo que consideraron sus escritos laquoculpadosraquo De su papel de laquosantaraquo pasa por lo tanto al de laquoposesaraquo o laquoendemoniadaraquo El inquisidor de Lima Gaitaacuten escribioacute un infor-me donde a traveacutes de la opinioacuten puacuteblica y de otras averiguaciones se deciacutea que dontildea Luisa Melgarejo laquomujer santaraquo sabiacutea cuando las almas de los difuntos saliacutean del Purga-torio El diacutea 14 de noviembre de 1623 se decidioacute tomar posesioacuten de todos los cuadernos en los que habiacutea escrito las experiencias de todos sus laquoarrobos suspensiones extasis y revelacionesraquo Estos cuadernos una vez recogidos presentaron toda una serie de al-teraciones borrones adiciones enmiendas incluso diferente letra por lo que despueacutes de haber sido examinados resultaron culpables145 Excelente imaginacioacuten debioacute tener dontildea Luisa Melgarejo la suficiente al parecer para convencer a algunos miembros de la iglesia de que en sus escritos laquohabiacutea algoraquo que mereciacutea la pena Estas cosas ocurriacutean en Lima uno de los centros culturales maacutes importantes de la vida social y poliacutetica en la Ameacuterica espantildeola Lima a comienzos del siglo XVII seguacuten el empadronamiento llevado

145 Serrano y Sanz 270 47 Veacutease J T Medina Historia del tribunal del Santo Oficio de la Inquisicioacuten de Lima (1569-1820) (Santiago Imprenta Gutemberg 1887) Tomo II 34-41

167ESPANtildeOLAS DE ULTRAMAR EN LA HISTORIA Y EN LA LITERATURA

a cabo en 1614 por el marqueacutes de Montesclaros era una ciudad de 25000 habitantes de los que 11000 eran espantildeoles El nuacutemero de religiosos y religiosas llegaba a 1720 (Pittaluga 77)

Se sabe que en la Isla de Santo Domingo durante el siglo XVI nacioacute o al menos resi-dioacute una poeta de ceacutelebre apellido en los aconteceres del Nuevo Mundo Dontildea Elvira de Mendoza de la que se conserva un manuscrito en la Real Academia de la Historia laquoCantares miacuteos que estaacuteis rebeladosraquo Eugenio de Salazar hace un elogio de ella como poeta en un Soneto a la ilustre Poeta y Sentildeora Dontildea Elvira de Mendoza moradora en la ciudad de Santo Domingo (Serrano y Sanz 270 53)

Nacida en Burgos sobre el antildeo 1590 dontildea Luisa de Padilla merece un lugar aparte dentro del grupo de mujeres escritoras de su eacutepoca Por su estilo faacutecil y castizo su no-vedad de pensamientos y su rica erudicioacuten recibioacute el siguiente comentario de Manuel Serrano y Sanz laquoPocas figuras hay en nuestra historia literaria femenil que puedan compararse a esta eminente prosista acaso la maacutes notable de cuantas florecieron en Es-pantildea durante el siglo XVIIraquo (Serrano y Sanz 270 95-96) Este comentario y comparacioacuten deberiacutea ampliarse para que tambieacuten incluyese a laquola historia literaria varonilraquo

Dontildea Luisa fue defensora de la labor que la Inquisicioacuten estaba realizando en la laquolim-piezaraquo de mujeres laquosoldados del demonioraquo que existieron en algunas provincias espa-ntildeolas en aquel tiempo Muchas de las mujeres que combinaban la magia con los po-deres curativos fueron condenadas no solamente por hombres de la Inquisicioacuten sino tambieacuten por mujeres de todas las clases sociales como es el caso de Luisa de Padilla condesa de Aranda En su obra Elogios de la verdad e invectiva contra la mentira preveniacutea contra aquellos que practicaban artes en contra de la religioacuten cristiana La magiacutea negra seguacuten Padilla era la causante de que muriesen casi tantas personas como otras causas naturales habieacutendose descubierto hasta seis mil brujas en Vizcaya y Guipuzcua con-fesando una mujer de un pueblo pequentildeo haber matado con su laquomagiaraquo a ochocientas personas (Perry 31) Eran estos laquomales de ojoraquo y maldiciones seguacuten la autora las causas de que se secasen los pechos de las madres lactantes que se separasen las parejas casa-das y que abortasen las embarazadas (Perry 31)

Si se tiene en cuenta que dontildea Luisa estuvo emparentada con la maacutes rancia aristocra-cia de su tiempo o lo que es lo mismo con algunos de aquellos que en cierta manera dirigiacutean los destinos de Espantildea en aquella eacutepoca (Duques de Lerma Duque de Uceda Marqueacutes de Cueacutellar Conde de Santa Gadea Marqueacutes de Belmonte por citar algunos) se comprenderaacute mejor su identificacioacuten con una institucioacuten que en teoriacutea velaba por la salvaguarda de los valores laquoeternosraquo de una Espantildea destinada a ser la campeona del ca-tolicismo durante los siglos XVI y XVII El padre de dontildea Luisa fue don Martiacuten de Padilla y Manrique extraordinario militar que proboacute su valor contra enemigos moriscos ingle-ses holandeses piratas berberiscos y el renegado genoveacutes Muley Faxad Fue veterano de la batalla de Lepanto donde apresoacute a cuatro galeras y acompantildeoacute con su escuadra a la reina Dontildea Margarita de Austria cuando vino de Geacutenova en 1598 laquoHabiacutea obtenido a 24 de julio de 1587 el tiacutetulo de Conde de Santa Gadea y en 1596 el de Capitaacuten General de la Armada del mar Oceacuteanoraquo (Serrano y Sanz 27095-96)

Por otra parte tambieacuten se sabe que dontildea Luisa participoacute directamente y desde tem-prana edad en la praacutectica de algunas actividades intelectuales como la historia y la arqueologiacutea a la vez que dedicaba su tiempo a virtudes cristianas como la caridad y el socorro de los necesitados (Serrano y Sanz 270 97) Resulta mucho maacutes faacutecil compren-

168 JUAN FRANCISCO MAURA

der la postura ideoloacutegica de esta gran mujer si tienen en cuenta ademaacutes de los factores antes mencionados otros tantos de caraacutecter biograacutefico concernientes a su educacioacuten y matrimonio

Otra escritora fue la mexicana dontildea Mariacutea Casilda Pozo natural de Temestla (Meacutexi-co) Nacida en el mes de abril de 1682 dejoacute escrita su biografiacutea en 16 cuadernos el ma-nuscrito original se encuentra en la biblioteca del colegio de San Gregorio de Meacutexico Fue su confesor el jesuiacuteta Domingo Quiroga que fue quieacuten la incitoacute a escribir su obra (Serrano y Sanz 270 137) Sor Juana de San Antonio aparece a principios del siglo XVII formando parte de un grupo de religiosas espantildeolas que fueron a Manila por la ruta de Meacutexico Ademaacutes de distinguirse por sus cualidades personales su obra interesa por ofrecer informacioacuten testimonial y costumbrista acerca de la forma de vestir de chinos y japoneses (Serrano y Sanz 270 225)

Otra monja esta vez ecuatoriana fue Gertrudis de San Ildefonso Nacida en 1652 profesoacute su vocacioacuten en el convento de Santa Cruz de Quito dejando escrita su vida por mandato de su confesor el padre Martiacuten de la Cruz el cual hizo una biografiacutea laquoen tres gruesos voluacutemenesraquo Gertrudis de San Ildefonso murioacute en 1709 (Serrano y Sanz 270 300) en olor de santidad

Sor Mariacutea Ana Agueda de San Ignacio nacioacute el 3 de marzo de 1695 en la dioacutecesis de la puebla de los Angeles en un rancho del lugar de Santiago Tecaliacute (Serrano y Sanz 270300) Esta monja mexicana escribioacute varias obras durante su vida conventual a lo largo de la cual desempentildeoacute el cargo de priora por muchos antildeos Entre sus obras todas de caraacutecter piacuteo y de laquoamor divinoraquo escribioacute un curioso y laquocopiosoraquo tratado de la Leche virginal de la Soberana Madre de Dios El padre Fr Juan de Villa Saacutenchez hace el siguiente comentario al respecto laquoen que hablando primero en sentido natural de los beneficios que debemos a Nuestra Sentildeora pasa a tratar en sentido miacutestico y alegoacuterico enten-diendo en la leche la doctrinaraquo (Serrano y Sanz 270301) Mexicana fue tambieacuten Sor Petronila de San Joseacute que ejercioacute como abadesa del Real monasterio de Jesuacutes Mariacutea de la ciudad de Meacutexico Escribioacute Vidas de varias religiosas ejemplares obra que tiene su im-portancia ya que al parecer laquoDe esta obra se sirvioacute D Carlos de Siguumlenza y Goacutengora para escribir su Parayso Occidental (Meacutexico 1684) seguacuten eacutel mismo declara en el proacutelogo diciendo lsquoa quien si hay algo bueno en esta historia se le debe todorsquoraquo (Serrano y Sanz 270 354) Menos conocida fue su compatriota Sor Luisa de Santa Catalina natural de Xacona laquopueblo situado en las inmediaciones de Zamora (Meacutexico)raquo siendo bautizada en 1682 Escribioacute Cartas espirituales a su confesor el P Juan Loacutepez de Aguado (Serrano y Sanz 270 361-62)146

Todos estos escritos la mayoriacutea de ellos ignorados por el gran puacuteblico tienen la im-portancia de darnos una perspectiva diferente En otras palabras ensentildearnos la maacutes refinada sensibilidad de muchas mujeres que permanecieron y en su mayoriacutea siguen permaneciendo a laquooscurasraquo de una eacutepoca tan rica de la literatura espantildeola como fue el Siglo de Oro Este siglo fue tambieacuten en su dimensioacuten literaria y artiacutestica patrimonio de la mujer

146 Para profundizar en muchas de estas escritoras hispano-americanas la consulta de la Biblioteca Hispano-Americana de Beristain de Souza resulta de capital importancia

169ESPANtildeOLAS DE ULTRAMAR EN LA HISTORIA Y EN LA LITERATURA

Sor Nada ardores divinos de una monja adolescente escritos ineacutedi-tos de una recieacuten profesa del siglo XVI147

iexclQueacute encantadores son tus amores hermana miacutea espo-sa iexclQueacute deliciosos son tus amores maacutes que el vino Y el aroma de tus perfumes es mejor que el de los baacutelsamos Miel virgen destilan tus labios esposa miel y leche hay en tu lengua y el perfume de tus vestidos es como aroma de incienso (Cantar de los Cantares 4 10-11)

Sor Nada llamada asiacute por humildad seguacuten dice el Indice de manuscritos de la Biblio-teca Nacional de Madrid es uno de los ejemplos maacutes desconocidos e interesantes que tenemos de la poesiacutea y prosa amoroso-religiosa del siglo XVII Hasta la fecha nunca se habiacutea publicado su obra e incluso hasta el antildeo 1995 para mi sorpresa no habiacutea copias microfilmadas de sus manuscritos en la Biblioteca Nacional Serrano y Sanz en su libro Apuntes para una Biblioteca de Escritoras Espantildeolas hace una escueta y pasajera mencioacuten de esta mujer y de su obra (68-69) siendo eso todo lo que hasta ahora se sabiacutea de ella Sus escritos consisten en los siguientes manuscritos

1 laquoEn queacute consiste un verdadero amor de Diosraquo 9 hojas uacutetiles en 4ordm letra del siglo XVII Biblioteca Nacional de Espantildea Manuscrito 1295926

2 laquoPintura del Propio Amorraquo laquoPintura del propio Amorraquo 10 hojas uacutetiles en 4ordm letra del siglo XVII Biblioteca Nacional de Espantildea Manuscrito 1295927

3 laquoEsplicacioacuten sobre en queacute consiste la paz del Almaraquo laquoQuartillas aacute un Alma que padece soledad interiorraquo 7 hojas uacutetiles en 4ordm letra del siglo XVII Biblioteca Nacio-nal de Espantildea Manuscrito 1295828

En cuanto a su persona soacutelo se nos dice que laquose encubrioacute con este seudoacutenimo laquoSor Nadaraquo Esta monja desconocida de origen hispanoamericano posee toda la frescura e ingenuidad de una joven apasionada metida por vocacioacuten u obligacioacuten a ejercer la profesioacuten maacutes comuacuten para mujeres de cierta clase social de su tiempo En sus liacuteneas podemos encontrar un misticismo simple incluso en algunos momentos infantil pero a su vez lleno de una fuerza y sensualidad interior poco comuacuten en escritos de este geacute-nero que desborda los liacutemites del laquoamor divinoraquo a traveacutes de los diaacutelogos entre el Alma y el Esposo Sor Nada consigue proyectar su amor a Dios maacutes allaacute de una experiencia romaacutentica Su experiencia es sincera y genuinamente miacutestica trascendiendo la imita-cioacuten o la propia creacioacuten poeacutetica ficcionalizada (Hatzfeld 30) Algunos pasajes son de un

147 Veacutease mi artiacuteculo Sor Nada ardores divinos de una monja adolescente escritos ineacuteditos de una monja profesa del siglo XVIIraquo Espeacuteculo Revista de estudios literarios 26 (2004) 1-10 Universidad Complutense de Madrid http wwwucmesinfoespeculonumero26sornadahtml

170 JUAN FRANCISCO MAURA

alto contenido eroacutetico con sustantivos y metaacuteforas que recuerdan la maacutes iacutentima unioacuten amorosa en unos casos y el tierno amor maternal en otros

[T]e miro Jesus mio desnudo a las inclemencias del tiempo y ardien-do en puro fuego de Amor por la salud de las Almas y me ensentildeas a que te ame con todo mi corason y puresa de espiritu No atendiendo ni buscando umanos intereses ni a solisitar consuelos ni regalos espi-rituales que suelen empantildear la puresa del noble corason No mi Jesus amable pues antes me ensentildeaste tu puro Amor que desnudo sean [sic] de encaminar mis passos desde el pesebre asta la cuna en donde te miro tan desnudo como el pesebre y todo Sentildeor por mi Amor (Mss 12959 26 hoja 1 v)

El manuscrito (12959 27) de la mencionada serie de tres contiene algunas correccio-nes quizaacute hechas por el confesor o quizaacute por ella misma cuando se dirige con excesiva familiaridad y arrebatado fervor a su Amado148 He escogido el manuscrito (12959 Caja 28) en primer lugar por ser el ejemplo maacutes representativo de su poesiacutea y prosa En este manuscrito encontramos de forma maacutes directa que alegoacuterica toda la frescura de un diaacutelogo entre Jesuacutes y el alma que raya como diriacutea Cervantes laquoa la llana y sin rodeosraquo (667 lib 2 cap 38) con el doloroso y a veces desesperado deseo de la entrega y la unioacuten final con el Amado La ortografiacutea no ha sido corregida respetaacutendose el texto ori-ginal149 Veamos el siguiente fragmento

Mira que te amo con Amor de padre y con Amor de esposo el mas fino y puro enamorado que no tan solo me presio de darte mi mano sino tambien todo mi cuerpo y sangre para que con mi pan de vida te sustentes y te regales a tus anchuras y que con mi propio espiritu vivas en paz como tu lo deseas y que mis amores sean unico alivio en tus trabajos en esta mortal vida pues si esto es asi y sabes que muero por darte vida dime esposa mia de que te fatigas Dame querida tus bras-sos y dime si me amas como yo te amo (Hoja 4)

148 La antologiacutea de Promis ha procurado insertar entre los textos antoloacutegicos algunos que se refieren a la es-critura de mujeres fundamentalmente de aquellos generados en el interior de los espacios conventuales Estos textos se fundan como laquohistorias de vidasraquo y responden casi siempre a los requerimientos de los confesores de las monjas coloniales En este sentido resulta valiosiacutesima la incorporacioacuten de la llamada Relacioacuten autobiograacute-fica de Sor Ursula Suaacuterez como una muestra significativa de la escritura monjil entendida en esta eacutepoca (como tambieacuten en la tradicioacuten europea medieval) inserta en las denominadas laquolabores de manoraquo de las religiosas ya que el texto escrito por mandato se convertiacutea en una suerte de entramado o tejido linguumliacutestico es decir en un nuevo bordado que la mayor parte de las veces el confesor convertido en censor iba haciendo tachando y enmendando En la antologiacutea Promis agrega un texto de Sor Tadea Garciacutea de la Huerta titulado Relacioacuten de la inundacioacuten que hizo el riacuteo Mapocho de la ciudad de Santiago de Chile en el monasterio de Carmelitas titular de San Rafael el diacutea 16 de junio de 1783 se trata de un poema tipo romance escrito en versos octosilaacutebicos y que da cuenta de lo sucedido ese diacutea en el convento (Resentildea de la literatura del reino de Chile de Joseacute Promis Eddie Morales Pintildea httpwwwupaclpublicaciones2002literatura_promishtm)

149 Son frecuentes las faltas ortograacuteficas Una de ellas es el uso constante del seseo La ausencia de acentua-cioacuten y puntuacioacuten exceptuando alguacuten punto o coma arbitrario no seguido casi nunca de mayuacutescula inicial lo mismo que el uso igualmente aribitrario de la h o de b v r q g j m n x etc No olvidemos de la misma forma la laxitud linguumliacutestica existente en el siglo XVII (no sabemos a queacute parte de eacuteste pertenece el manuscrito) asiacute como la joven edad de la monja

171ESPANtildeOLAS DE ULTRAMAR EN LA HISTORIA Y EN LA LITERATURA

Los versos del presente manuscrito poseen la misma fuerza que tiene su prosa Con una estructura estroacutefica indefinida estaacuten aparentemente corregidos por alguien que tu-vo la oportunidad de conocer personalmente a la autora Muy probablemente se trate del padre al que hace referencia al principio del primer manuscrito laquoMandame el Pd que le declare en que consiste un verdadero amor a Diosraquo a continuacioacuten continuacutea con su caracteriacutestica humildad laquo[O]bedesere y dire lo q Dios me inspire segun mi rudesa y simplisidadraquo (Mss 12959 26) En cuanto a la fuerza pasional de esta joven observamos con cierta tristeza coacutemo aparece sublimada en sus escritos con toda la enegiacutea de una joven mujer llena de intensidad y vida pero encerrada en los liacutemites de un convento Veamos un ejemplo en donde responde el Alma en los siguientes versos

O mi enamorado Jesus O mi dulse y tierno amanteO alegria de los sielos O dulse Jesus amable

(Toda Sentildeor me derrito toda Sentildeor me desagoy quiero vivir por ti ea sentildeor abrasadme) [Tachado en el original]

Toda Sentildeor me derrito toda Sentildeor me desagoy quiero morir por vos ea Sentildeor que ya acabo

Ya tus amores me llaman ya tus perfumes me traencon suspiros y agonias Sentildeor hasta que te alcanse

O mi Jesus amoroso no puedo mas dilatarmeya la pasiensia me falta dulse Jesus abrasadme

(No puedo vivir sin vos no puedo mas dilatarmeya la pasiensia me falta dulse) [Tachado en el original]

No puedo vivir sin vos mi dulse Jesus amablepues me teneis echisada siendo mi esposo y mi Padre

Ay que me abraso Ay que me quemo del Amor deJesus nasareno como no tocan y tantildeen a fuego150

Estos versos llenos de arrebato sublimado conectan con toda la tradicioacuten miacutestica es-pantildeola que se remonta a Ramoacuten Llul y que culmina en el maacutes universal de nuestros

150 En toda la fuerza y simbologiacutea del amor maacutes iacutentimo del maacutes alto y sublime placer de la unioacuten de los amantes tal como lo encontramos en el Cantar de los Cantares y en San Juan de la Cruz Leemos en la Biblia

Ya me he quitado la tuacutenica iquestCoacutemo volver a vestirme Ya me he lavado los pies iquestCoacutemo volver a ensuciarlosMi amado metioacute su mano por el agujero (de la llave) y mis entrantildeas se estremecieron por eacutel Me levanteacute para abrir a mi amado Mis manos destilaron mirra y mis dedos mirra exquisita en el pestillo de la cerradura (5 3-5)

Nos ocurre lo mismo con San Juan de la Cruz en su insuperable poema laquoLlama de amor vivaraquo

iexclOh cauterio suaveiexclOh regalada llagaiexclOh mano blanda iexclOh toque delicadoque a vida eterna sabey toda deuda pagaMatando muerte en vida la has trocado

172 JUAN FRANCISCO MAURA

miacutesticos San Juan de la Cruz Esta tradicioacuten se extiende hasta finales del siglo XVII esto es hasta los finales del Barroco siendo un poco maacutes tardiacuteo en la Ameacuterica espantildeola Sin tener como propoacutesito discutir en el presente trabajo a queacute corriente miacutestica pertenece la obra de Sor Nada es necesario resaltar no obstante el hecho de que estaacute escrito por una mujer y ademaacutes de tierna edad El manuscrito 12959 Caja 26 termina con estas pa-labras laquo[T]odas estas boverias escrivi por entretenimiento siendo resien profesa en la religion Sor Nadaraquo Mas no por la juventud de su autora los escritos dejan de tener lo-gradas metaacuteforas imaacutegenes y siacutembolos sacados de la naturaleza La alegoriacutea de la unioacuten matrimonial poseeacute el fuego liacuterico de la maacutes apasionada de las relaciones amorosas vivi-ficada por perfumes flores insectos animales escarchas nieves o abrojos Por lo tanto aunque la narracioacuten destile cierta ingenuidad no carece por ello de un vocabulario rico con el sabor popular de la poesiacutea de los cancioneros y romances de tradicioacuten renacen-tista No ha sido otra mi intencioacuten que la de rescatar del olvido unos escritos en prosa y en verso llenos de frescura y espontaneidad que nos muestran la pasioacuten con que la joven novicia se laquoentrega en cuerpo y almaraquo a los menesteres de su profesioacuten guiada por un padre espiritual en esos primeros antildeos de formacioacuten Esta ha sido la razoacuten por la que presento a continuacioacuten el citado manuscrito en su totalidad

Sor Nada (Mss 1295928)

laquoEsplicacion sobre en que consiste la paz del AlmaraquolaquoQuartillas a un Alma que padece soledad interiorraquo

[7 hojas utiles en 4ordm letra del siglo XVII]

+

Esplicacion sobre en que consiste la paz del Alma

Pareseme segun mi rudo entender que la verdadera paz del Alma con-siste en una muy pura y buena consiencia en un corason liso y bien intensionado en una verdadera rectitud de espiritu en el qual el Alma procura bolar a Dios sin jamas detenerse a respetos umanos ni reparar en que me diran ni de que me censuraran sino me apresuro a seguir a unos entenderes y pareseres dorados en los quales pretende el mundo engantildear y ensuciar si se puede la puresa de un corason unicamente de Dios y de su Santa ley y se lo conserva cristalino con la divina asis-tencia de la gracia y comprendido de su Amor y temor siguiendo la luz divina de tan amante Sentildeor Dios y ombre verdadero con que este ilustrado corason ni se altera ni se mueve por los disfrasses dorados que ase el mundo y sus moradores mayormente con falssas amistades aunque con ellos muestre buena intension Con la misma grasia y luz de Dios conose el buen corason estos disfrasses que le ase el mundo y se retira de todo con espiritu y valor esto sin la menor alterasion sino que en suma paz se retira a buscar a Dios dentro de su mismo corason

173ESPANtildeOLAS DE ULTRAMAR EN LA HISTORIA Y EN LA LITERATURA

y se abrasa con su pura verdad en la qual se le descubren mil interio-res secretos tan solidos puros y verdaderos que la misma Alma queda abismada y de puro grandes no los puede bien comprender ni esplicar pero estos mismos secretos divinos le sirven de espuelas para no solo correr sino bolar con pies de plumas en seguimiento de su bien ama-do Jesus y como este soberano Sentildeor es tan amante de sus espossas las Almas luego que la ve bolar con pies de plumas la sale al encuen-tro en despoblado campo que se deve de llamar Campo de Amor de Dios y el mismo Sentildeor se viene a las manos por ser Dios que nos ama con Amor infinito de Padre benigno y amoroso con que asiendose en contra deso este divino enamorado en lo interyor de el Alma que le busca con ansias de servirle y amarle y en aquella soledad traban una conversasion amorosa y sensilla como la pluma simple de quien esto escrive

Divino enquentroDios y el Alma en la soledad

O Soberano Principe de la paz dise el Alma tus perfumes me traen a ti bolando porque alla en el mundo y sus valedores me pretendian engantildear y entretenerme con pegaminossas amistades que facilmen-te me pudieran envenenar y matarme apartandome de ti Mi dulse Jesus amable mi Redentor Soberano que con tantas ansias me sales al enquentro como siervo [ciervo] erido de mis Amores los quales tu Amor me ofrese para que con tu mismo Amor te ame y te sirva en paz sin perturbarme ni contristarme ni cansarme de padeser pasando si se ofrese por escarchas nieves espinas ni abrojos ni por otros diverssos trabajos ni piedras de contradision que tu me puedes permitir pues por mas que el mar se levante con sus ferosses olas contra mi ni piedras se me tiren al rostro en todo Sentildeor me quieres con serenidad pasifica sin la menor perturbasion Todo Sentildeor quieres que lo tome con Serenidad de espiritu y asi vengo a ti bolando para que mejor me ensentildees a vivir segun las leyes de tu noble condision que me son muy agradables por mas que el mundo me las despresie por segir sus vanidades y torsidas intensiones con apariensias de bien y con este engantildeo y bien me quie-ro mas a mi que no a mi proximo veo que segun mi pareser se pierden muchas Almas y tambien de aquellos que se depresian y pasan por muy espirituales Con que me paresen pocos los que llegan a padeser con desnudes151 de espiritu por tu purisimo Amor y me parese essas se quedan muy atrasadas en la virtud por el peligro de bolver muy atras el paso de modo que se pueden despentildear y pereser en su misma desgra-sia ya por soberbia o por otras enfermedades que se les pega al corason y asi lo pasan como siegos ignorantes sin advertir en sus peligros

151 La letra en cursiva es miacutea

174 JUAN FRANCISCO MAURA

este aquerdo Sentildeor y otros que tu verdad me ensentildea me ase venir uyendo de las paredes del mundo y me vengo a ti Dios mio bolando con las dos Alas del Amor y temor que tu mismo Amor me ofrese tan de gracia y tan de grado que no se duentildeo mio con que lo responder a tan soberano beneficio y finesa de tus entrantildeas de Amorvengo Sentildeor y esposo mio unicamente a descansar en ti pues los peli-gros del camino me an puesto en mucho sobresalto temiendo el per-derte y sin ti perderme para siempre por una eternidad sin fin pues deseo amado mio ganarme ganandote a ti y vivir en ti aora en vida y despues eternamente y estos cuidados me traen fatigada molida y cansada y no podre tener alivio y descanso sino viendome entre tus brassos aunque sea estando en cruz pues ese es el fin de mis deseos vivir y morir en ti ablame mi cordero manso y ensentildeame a que ver-daderamente te ame como fiel esposa ea mi caro amigo dame la ma-no pues sabes Amor mio que en mi no ay mano sin tu misma mano y asi mi Dios y Sentildeor mi Principe Soberano con umilde rendimiento y deseos de alcansarte te suplico me des la mano y me consueles en estos mis trabajos Deseo Sentildeor vivir en paz y los malos amores de mi Naturaleza flaca no me dejan detentar y no quieren por mi desgrasia atropellar con las leyes de tu Amor ni quisiera perturbar mi corason quando me veo con un torvellino de olas y contratiempos que a menu-do me suelen sercar pero si tu Sentildeor me das la mano nada temo sino que me aseguro y vivire en paz sin que me fatiguen los contratiempos pues mi mano en la tuya y mi espiritu en el tuyo por mas borrascas que me envistan no seran bastantes para rendir mi voluntad a la suya bien si para pronunsiar un fiat que resuene bien atras en tus oidos y que en medio de mis fatigas me ponga a cantar tus divinas misericor-dias hea Sentildeor ya pretendo serrar mis labios por no desir mas bove-rias y deseo Sentildeor oir tus palabras de vida eterna abla Sentildeor que tu sierva oye con atension y cuydado mira mi Dios que se me ase tarde y espero con prisa deseando saborearme y aprovecharme de los ecos de tu Santa dotrina pues todas tus palabras saben a eterna vida callen pues mis sentidos y potensias y todo se ponga en paz pues mi dulse y soberano Sentildeor no se escusara de ablar me aun que en mudo silensio hea mi gran Prinsipe de la paz ablame que tus puros amores me traen perdida por estos asperos montes y mis cortos pasos no te pueden dar alcanse mirame mi Dios a tus pies postrada como un vil gusano y me-nor ormiga de la tierraabla Jesus y dise a su esposa el Alma querida esposa mia que me pides y por que te muestras tan fatigada y mal sufrida no vives como corde-rita del campo buscando de mis pechos el sustancial pasto mi Amor no te sustenta y mi grasia te promete eterna vida pues dime amada de que te fatigas y te muestras mal sufrida mira que te amo con Amor de padre y con Amor de esposo el mas fino y puro enamorado que no tan solo me presio de darte mi mano sino tambien todo mi cuerpo y

175ESPANtildeOLAS DE ULTRAMAR EN LA HISTORIA Y EN LA LITERATURA

sangre para que con mi pan de vida te sustentes y te regales a tus an-churas y que con mi propio espiritu vivas en paz como tu lo deseas y que mis amores sean unico alivio en tus trabajos en esta mortal vida pues si esto es asi y sabes que muero por darte vida dime esposa mia de que te fatigas Dame querida tus brassos y dime si me amas como yo te amoResponde el Alma152 Tu mi Dios sabes si yo te amo pues de mi solo se que mis deseos y ansias buelan a ti mas no alcanso a saber si te amo como tu de-seas ser amado y como desconfio tanto de mi y de mis prosederes falssos temo Dios mio perderme y perderte y asi Sentildeor pues no desechas mis Amores y te muestras tan fino en amarme te pido me ensentildees a vivir segun las leyes de tu pura verdad y fina condisionhija mia dise Dios la prueva de un verdadero Amor consiste en sufrir callar y padeser por mi unico Amor y en todo seguir mis pasos sin ja-mas retroseder por mas fragoso que se muestre el camino pues nunca seran tantas las espinas las escarchas ni las nieves ni los vientos bo-rrascosos que te se ofrescan pasar por mi Amor como los que mi tierno y desinteresado Amor paso por ti y siempre con mis pies descalssos y asi hija y esposa mia muestrate costante en seguir lo perfecto de mis passos pues mi braso fuerte sera en ti y peleara por ti y te sera el todo en tus nesesidades y mi Amor te convertira en dulse y suave lo amargo y molesto a la condision de la carrne

Responde el Alma

O mi enamorado Jesus O mi dulse y tierno amanteO alegria de los sielos O dulse Jesus amable

(Toda Sentildeor me derrito toda Sentildeor me desagoy quiero vivir por ti ea sentildeor abrasadme) [Tachado en el original]

Toda Sentildeor me derrito toda Sentildeor me desagoy quiero morir por vos ea Sentildeor que ya acabo

Ya tus amores me llaman ya tus perfumes me traencon suspiros y agonias Sentildeor asta que te alcanse

O mi Jesus amoroso no puedo mas dilatarmeya la pasiensia me falta dulse Jesus abrasadme

(No puedo vivir sin vos no puedo mas dilatarmeya la pasiensia me falta dulse) [Tachado en el original]

No puedo vivir sin vos mi dulse Jesus amablepues me teneis echisada siendo mi esposo y mi Padre

152 La aparicioacuten de una mayuacutescula al principio de una oracioacuten es algo totalmente arbitrario en este ma-nuscrito dada la libertad ortograacutefica de la autora Como se puede observar en la mayor parte de las veces no es el caso

176 JUAN FRANCISCO MAURA

Ay que me abraso Ay que me quemo del Amor deJesus nasareno como no tocan y tantildeen a fuego

Responde Jesus Hija mia tus simples vozes oygo y aunque resuenan bien a mis oidos pero te deseo mas mansa y pasifica en tus fervores ya sabes que no siempre as de vivir en mantillas ni a los pechos de tu Madre por que es rason que padescas con espiritu fuerte como mu-jer valerosa por que a una esposa del Rey soberano y prinsipe de la paz no le estan bien chiquerias ni fervores de nintildea malcriada y ya es ora que la destete su Madre la Naturaleza y que empesando su nueva vida camine con el favor de mi grasia sigiendo mis passos de eterna vida esto con sus pies descalssos segun mis leyes de Amor puro y desinteresado lo tienen ordenado153 y vivir en paz como lo deje en-cargado a mis apostoles Santos repitiendoles varias vezes Vivir en pas y caridad esto es un vivir en Dios y Dios en el Alma y asi hija mia el Alma que vive en paz vive en mi Como mis cortesanos en el cielo y pues me pides que te ensentildee a vivir segun las leyes de mi condision Repito el desir que te debes mostrar sufrida en todo tiempo y estado sin permitir en tu corason que ni aun los fervores se adelanten con estremos ni ademanes sino atiende y aprende de mi purisima Madre pues siempre la veras si bien lo consideras que mientras vivio en el mundo en todos sus trabajos se mostro firme fuerte costante como piedra diamante Pues mirandome nintildeo entre sus brasos desnudo en el pesebre desnudo y crusificado en los brassos de una cruz En estos y otros passos no se mudo su rostro sino que en suma serenidad y pasifico corason toda se sacrificaba enteramente en los brassos de mi Amor y rendido su corason y voluntad en la de mi eterno Padre por ejemplo te la doy y deseo que aprendas de sus nobles calidades pues te aseguro carisima que las leyes de mi condision y pura verdad todo lo allaras enserrado en el corason de mi purisima Madre sedle fiel y descansaras en paz

+

Quartillas a un alma que padese soledad interior

1Un Alma afligida y tristese ve en un campo desiertay en el su esposo la tieneAtormentada y sedienta

153 Es a traveacutes de estas liacuteneas lo que hace suponer que la autora de este diaacutelogo amoroso entre el Alma y Je-suacutes es novicia esto es laquoque estaacute empesando su nueva vidaraquo En las mismas liacuteneas una vez maacutes se hace alusioacuten al laquodesteteraquo de su vida civil laquoa una esposa del Rey soberano y principe de la paz no le estan bien chiquerias ni fervores de nintildea malcriada y ya es ora que la destete su Madre la naturalesaraquo (fol 5)

177ESPANtildeOLAS DE ULTRAMAR EN LA HISTORIA Y EN LA LITERATURA

2Pendiente se ve en el AyreSolo un hilo la sustentasin tocar el pie en el sueloporque del no tome tierra

3Mirandola esta yto a ytoaquel sol que la atraviesay la enviste con sus rayosmas ella no pestantildeea

4Como sigarra padese y como a tal se atormentabatiendo sus mismas Alasy el corason se atraviesa

5Con penas sustos temoresquando se mira assi mesmasin tener valor en nadaporque es la misma flaquesa

6Pero el Amor de su esposotoda su atension le llevay la pone en un abismopero cubierto en tiniebla

7Desea dar algun bueloy subir con ligeresapero se mira travadacon una fuerte cadena

8Clama suspira y padeseMas del todo se sujetaRindiendo su voluntadA la divina clemencia

9Los enemigos del AlmaCruelmente le asen guerray ella aunque firme y constantelos reselos la atormentan

178 JUAN FRANCISCO MAURA

10de todos modos padeseaunque gosa la asistensiadel divino esposo amadoque en su interior se recrea

11Solo de verla penary con verla tan serenadise resibe mil gustosde su sigarra pequentildea

12Le sabe el mundo a mil yelesy su trato le atormentaviendo en el mil falsedadesque todas saben a tierra

13Para poderse librardeja de correr y buelacon las Alas del Amory el mismo Amor se la lleva

Una vida dedicada a un amor divino un amor que le haraacute llenar un buen nuacutemero de cuartillas dedicadas a tan alta empresa Se desconoce si la vocacioacuten de Sor Nada con-tinuoacute con tanta intensidad el resto de sus diacuteas Ciertamente la vida en el covento no era faacutecil En algunos casos la experiencia era traumaacutetica incluso fatal para algunas de las adolescentes de la Ameacuterica Espantildeola Las reglas del claustro eran severas por varias razones Estas joacutevenes si no teniacutean el permiso de la superiora no podiacutean recibir visitas no podiacutean volver a sus casas su correspondencia era censuraba y no podiacutean salir del periacutemetro conventual Igualmente se levantaban antes del amanecer para oir misa tra-bajaban el resto del diacutea y lo maacutes interesante es que muchas veces esta vida era aceptada por muchas

Page 36: Tercera parte: Mujeres en la vida intelectual - …parnaseo.uv.es/Editorial/Maura/TerceraParte.pdf · La Biblia, por su parte, hace repetidas menciones de la mujer y sobre el comporta-

166 JUAN FRANCISCO MAURA

Sobremdash A la muy alta y muy poderosa sentildeora Princesa dontildea Joana Gobernadora de los reinos de Espantildea etc ndash En su Consejo de Indias (Isabel de Guevara 619-21)

Iroacutenicamente la carta teniacutea que llegar a manos de la desdichada heredera del trono de Castilla e hija de los Reyes Catoacutelicos Juana laquola Locaraquo que habiacutea muerto el antildeo an-terior Son profeacuteticas las palabras de esta mujer no soacutelo porque sus hechos personales quedasen en el olvido sino porque incluso se ha borrado la historia de las mujeres en el Nuevo Mundo negando su presencia Por lo menos Isabel Guevara tuvo acceso a una pluma iquestCuaacutentas seriacutean las que ni siquiera sabriacutean escribir

Otra contemporaacutenea fue dontildea Leonor de Iciz que vivioacute durante la segunda mitad del siglo XVI Interesa sobre todo por los sonetos que escribioacute en elogio de Ercilla soldado que participoacute en la conquista de Chile y que se inmortalizoacute con su obra La Araucana (Serrano y Sanz 269 534) Lo mismo hizo Dontildea Bernarda Lintildeaacuten en 1610 autora de otro soneto en memoria del capitaacuten Gaspar Peacuterez de Villagraacute que participoacute en la conquista de Nuevo Meacutexico (Serrano y Sanz 270 14) Los escritos de estas mujeres tratan de de dos de las eacutepicas maacutes dramaacuteticas de la conquista

En el Peruacute y en pleno siglo XVII aparece otra fundadora de conventos Sor Bernardina de Jesuacutes que ademaacutes fue comparada con Santa Teresa por la semejanza de sus laquocartasraquo con las de la santa de Avila Fue fundadora del convento de Tacunga en Quito maacutes tarde destruiacutedo por un terremoto Dice Serrano y Sanz con respecto a su biografiacutea un tanto legendaria que fue carmelita descalza de Lima y hermana de Dontildea Mariacutea Benavides y Esquivel abuela de D Pedro de Peralta Barnuevo (Serrano y Sanz 269 553) Dicen que esta santa se alimentoacute durante treinta antildeos con laquochochos y caacutescaras de naranja hecho tan raro como increiacuteble Cuando fallecioacute reparaban las monjas en ponerle una vara de azucenas porque habiacutea sido casada y aquellas flores aparecieron milagrosamente sobre el cadaacuteverraquo (Serrano y Sanz 269 553)

Otra limentildea del primer cuarto del siglo XVII con reputacioacuten de santa fue Dontildea Luisa Melgarejo En este caso no se trata de una religiosa de oficio sino de la mujer del doctor Juan de Soto La uacutenica diferencia es que dontildea Luisa al parecer teniacutea laquovisiones y reve-lacionesraquo lo que debioacute poner nervioso a maacutes de un miembro del tribunal del laquoSanto Oficioraquo que consideraron sus escritos laquoculpadosraquo De su papel de laquosantaraquo pasa por lo tanto al de laquoposesaraquo o laquoendemoniadaraquo El inquisidor de Lima Gaitaacuten escribioacute un infor-me donde a traveacutes de la opinioacuten puacuteblica y de otras averiguaciones se deciacutea que dontildea Luisa Melgarejo laquomujer santaraquo sabiacutea cuando las almas de los difuntos saliacutean del Purga-torio El diacutea 14 de noviembre de 1623 se decidioacute tomar posesioacuten de todos los cuadernos en los que habiacutea escrito las experiencias de todos sus laquoarrobos suspensiones extasis y revelacionesraquo Estos cuadernos una vez recogidos presentaron toda una serie de al-teraciones borrones adiciones enmiendas incluso diferente letra por lo que despueacutes de haber sido examinados resultaron culpables145 Excelente imaginacioacuten debioacute tener dontildea Luisa Melgarejo la suficiente al parecer para convencer a algunos miembros de la iglesia de que en sus escritos laquohabiacutea algoraquo que mereciacutea la pena Estas cosas ocurriacutean en Lima uno de los centros culturales maacutes importantes de la vida social y poliacutetica en la Ameacuterica espantildeola Lima a comienzos del siglo XVII seguacuten el empadronamiento llevado

145 Serrano y Sanz 270 47 Veacutease J T Medina Historia del tribunal del Santo Oficio de la Inquisicioacuten de Lima (1569-1820) (Santiago Imprenta Gutemberg 1887) Tomo II 34-41

167ESPANtildeOLAS DE ULTRAMAR EN LA HISTORIA Y EN LA LITERATURA

a cabo en 1614 por el marqueacutes de Montesclaros era una ciudad de 25000 habitantes de los que 11000 eran espantildeoles El nuacutemero de religiosos y religiosas llegaba a 1720 (Pittaluga 77)

Se sabe que en la Isla de Santo Domingo durante el siglo XVI nacioacute o al menos resi-dioacute una poeta de ceacutelebre apellido en los aconteceres del Nuevo Mundo Dontildea Elvira de Mendoza de la que se conserva un manuscrito en la Real Academia de la Historia laquoCantares miacuteos que estaacuteis rebeladosraquo Eugenio de Salazar hace un elogio de ella como poeta en un Soneto a la ilustre Poeta y Sentildeora Dontildea Elvira de Mendoza moradora en la ciudad de Santo Domingo (Serrano y Sanz 270 53)

Nacida en Burgos sobre el antildeo 1590 dontildea Luisa de Padilla merece un lugar aparte dentro del grupo de mujeres escritoras de su eacutepoca Por su estilo faacutecil y castizo su no-vedad de pensamientos y su rica erudicioacuten recibioacute el siguiente comentario de Manuel Serrano y Sanz laquoPocas figuras hay en nuestra historia literaria femenil que puedan compararse a esta eminente prosista acaso la maacutes notable de cuantas florecieron en Es-pantildea durante el siglo XVIIraquo (Serrano y Sanz 270 95-96) Este comentario y comparacioacuten deberiacutea ampliarse para que tambieacuten incluyese a laquola historia literaria varonilraquo

Dontildea Luisa fue defensora de la labor que la Inquisicioacuten estaba realizando en la laquolim-piezaraquo de mujeres laquosoldados del demonioraquo que existieron en algunas provincias espa-ntildeolas en aquel tiempo Muchas de las mujeres que combinaban la magia con los po-deres curativos fueron condenadas no solamente por hombres de la Inquisicioacuten sino tambieacuten por mujeres de todas las clases sociales como es el caso de Luisa de Padilla condesa de Aranda En su obra Elogios de la verdad e invectiva contra la mentira preveniacutea contra aquellos que practicaban artes en contra de la religioacuten cristiana La magiacutea negra seguacuten Padilla era la causante de que muriesen casi tantas personas como otras causas naturales habieacutendose descubierto hasta seis mil brujas en Vizcaya y Guipuzcua con-fesando una mujer de un pueblo pequentildeo haber matado con su laquomagiaraquo a ochocientas personas (Perry 31) Eran estos laquomales de ojoraquo y maldiciones seguacuten la autora las causas de que se secasen los pechos de las madres lactantes que se separasen las parejas casa-das y que abortasen las embarazadas (Perry 31)

Si se tiene en cuenta que dontildea Luisa estuvo emparentada con la maacutes rancia aristocra-cia de su tiempo o lo que es lo mismo con algunos de aquellos que en cierta manera dirigiacutean los destinos de Espantildea en aquella eacutepoca (Duques de Lerma Duque de Uceda Marqueacutes de Cueacutellar Conde de Santa Gadea Marqueacutes de Belmonte por citar algunos) se comprenderaacute mejor su identificacioacuten con una institucioacuten que en teoriacutea velaba por la salvaguarda de los valores laquoeternosraquo de una Espantildea destinada a ser la campeona del ca-tolicismo durante los siglos XVI y XVII El padre de dontildea Luisa fue don Martiacuten de Padilla y Manrique extraordinario militar que proboacute su valor contra enemigos moriscos ingle-ses holandeses piratas berberiscos y el renegado genoveacutes Muley Faxad Fue veterano de la batalla de Lepanto donde apresoacute a cuatro galeras y acompantildeoacute con su escuadra a la reina Dontildea Margarita de Austria cuando vino de Geacutenova en 1598 laquoHabiacutea obtenido a 24 de julio de 1587 el tiacutetulo de Conde de Santa Gadea y en 1596 el de Capitaacuten General de la Armada del mar Oceacuteanoraquo (Serrano y Sanz 27095-96)

Por otra parte tambieacuten se sabe que dontildea Luisa participoacute directamente y desde tem-prana edad en la praacutectica de algunas actividades intelectuales como la historia y la arqueologiacutea a la vez que dedicaba su tiempo a virtudes cristianas como la caridad y el socorro de los necesitados (Serrano y Sanz 270 97) Resulta mucho maacutes faacutecil compren-

168 JUAN FRANCISCO MAURA

der la postura ideoloacutegica de esta gran mujer si tienen en cuenta ademaacutes de los factores antes mencionados otros tantos de caraacutecter biograacutefico concernientes a su educacioacuten y matrimonio

Otra escritora fue la mexicana dontildea Mariacutea Casilda Pozo natural de Temestla (Meacutexi-co) Nacida en el mes de abril de 1682 dejoacute escrita su biografiacutea en 16 cuadernos el ma-nuscrito original se encuentra en la biblioteca del colegio de San Gregorio de Meacutexico Fue su confesor el jesuiacuteta Domingo Quiroga que fue quieacuten la incitoacute a escribir su obra (Serrano y Sanz 270 137) Sor Juana de San Antonio aparece a principios del siglo XVII formando parte de un grupo de religiosas espantildeolas que fueron a Manila por la ruta de Meacutexico Ademaacutes de distinguirse por sus cualidades personales su obra interesa por ofrecer informacioacuten testimonial y costumbrista acerca de la forma de vestir de chinos y japoneses (Serrano y Sanz 270 225)

Otra monja esta vez ecuatoriana fue Gertrudis de San Ildefonso Nacida en 1652 profesoacute su vocacioacuten en el convento de Santa Cruz de Quito dejando escrita su vida por mandato de su confesor el padre Martiacuten de la Cruz el cual hizo una biografiacutea laquoen tres gruesos voluacutemenesraquo Gertrudis de San Ildefonso murioacute en 1709 (Serrano y Sanz 270 300) en olor de santidad

Sor Mariacutea Ana Agueda de San Ignacio nacioacute el 3 de marzo de 1695 en la dioacutecesis de la puebla de los Angeles en un rancho del lugar de Santiago Tecaliacute (Serrano y Sanz 270300) Esta monja mexicana escribioacute varias obras durante su vida conventual a lo largo de la cual desempentildeoacute el cargo de priora por muchos antildeos Entre sus obras todas de caraacutecter piacuteo y de laquoamor divinoraquo escribioacute un curioso y laquocopiosoraquo tratado de la Leche virginal de la Soberana Madre de Dios El padre Fr Juan de Villa Saacutenchez hace el siguiente comentario al respecto laquoen que hablando primero en sentido natural de los beneficios que debemos a Nuestra Sentildeora pasa a tratar en sentido miacutestico y alegoacuterico enten-diendo en la leche la doctrinaraquo (Serrano y Sanz 270301) Mexicana fue tambieacuten Sor Petronila de San Joseacute que ejercioacute como abadesa del Real monasterio de Jesuacutes Mariacutea de la ciudad de Meacutexico Escribioacute Vidas de varias religiosas ejemplares obra que tiene su im-portancia ya que al parecer laquoDe esta obra se sirvioacute D Carlos de Siguumlenza y Goacutengora para escribir su Parayso Occidental (Meacutexico 1684) seguacuten eacutel mismo declara en el proacutelogo diciendo lsquoa quien si hay algo bueno en esta historia se le debe todorsquoraquo (Serrano y Sanz 270 354) Menos conocida fue su compatriota Sor Luisa de Santa Catalina natural de Xacona laquopueblo situado en las inmediaciones de Zamora (Meacutexico)raquo siendo bautizada en 1682 Escribioacute Cartas espirituales a su confesor el P Juan Loacutepez de Aguado (Serrano y Sanz 270 361-62)146

Todos estos escritos la mayoriacutea de ellos ignorados por el gran puacuteblico tienen la im-portancia de darnos una perspectiva diferente En otras palabras ensentildearnos la maacutes refinada sensibilidad de muchas mujeres que permanecieron y en su mayoriacutea siguen permaneciendo a laquooscurasraquo de una eacutepoca tan rica de la literatura espantildeola como fue el Siglo de Oro Este siglo fue tambieacuten en su dimensioacuten literaria y artiacutestica patrimonio de la mujer

146 Para profundizar en muchas de estas escritoras hispano-americanas la consulta de la Biblioteca Hispano-Americana de Beristain de Souza resulta de capital importancia

169ESPANtildeOLAS DE ULTRAMAR EN LA HISTORIA Y EN LA LITERATURA

Sor Nada ardores divinos de una monja adolescente escritos ineacutedi-tos de una recieacuten profesa del siglo XVI147

iexclQueacute encantadores son tus amores hermana miacutea espo-sa iexclQueacute deliciosos son tus amores maacutes que el vino Y el aroma de tus perfumes es mejor que el de los baacutelsamos Miel virgen destilan tus labios esposa miel y leche hay en tu lengua y el perfume de tus vestidos es como aroma de incienso (Cantar de los Cantares 4 10-11)

Sor Nada llamada asiacute por humildad seguacuten dice el Indice de manuscritos de la Biblio-teca Nacional de Madrid es uno de los ejemplos maacutes desconocidos e interesantes que tenemos de la poesiacutea y prosa amoroso-religiosa del siglo XVII Hasta la fecha nunca se habiacutea publicado su obra e incluso hasta el antildeo 1995 para mi sorpresa no habiacutea copias microfilmadas de sus manuscritos en la Biblioteca Nacional Serrano y Sanz en su libro Apuntes para una Biblioteca de Escritoras Espantildeolas hace una escueta y pasajera mencioacuten de esta mujer y de su obra (68-69) siendo eso todo lo que hasta ahora se sabiacutea de ella Sus escritos consisten en los siguientes manuscritos

1 laquoEn queacute consiste un verdadero amor de Diosraquo 9 hojas uacutetiles en 4ordm letra del siglo XVII Biblioteca Nacional de Espantildea Manuscrito 1295926

2 laquoPintura del Propio Amorraquo laquoPintura del propio Amorraquo 10 hojas uacutetiles en 4ordm letra del siglo XVII Biblioteca Nacional de Espantildea Manuscrito 1295927

3 laquoEsplicacioacuten sobre en queacute consiste la paz del Almaraquo laquoQuartillas aacute un Alma que padece soledad interiorraquo 7 hojas uacutetiles en 4ordm letra del siglo XVII Biblioteca Nacio-nal de Espantildea Manuscrito 1295828

En cuanto a su persona soacutelo se nos dice que laquose encubrioacute con este seudoacutenimo laquoSor Nadaraquo Esta monja desconocida de origen hispanoamericano posee toda la frescura e ingenuidad de una joven apasionada metida por vocacioacuten u obligacioacuten a ejercer la profesioacuten maacutes comuacuten para mujeres de cierta clase social de su tiempo En sus liacuteneas podemos encontrar un misticismo simple incluso en algunos momentos infantil pero a su vez lleno de una fuerza y sensualidad interior poco comuacuten en escritos de este geacute-nero que desborda los liacutemites del laquoamor divinoraquo a traveacutes de los diaacutelogos entre el Alma y el Esposo Sor Nada consigue proyectar su amor a Dios maacutes allaacute de una experiencia romaacutentica Su experiencia es sincera y genuinamente miacutestica trascendiendo la imita-cioacuten o la propia creacioacuten poeacutetica ficcionalizada (Hatzfeld 30) Algunos pasajes son de un

147 Veacutease mi artiacuteculo Sor Nada ardores divinos de una monja adolescente escritos ineacuteditos de una monja profesa del siglo XVIIraquo Espeacuteculo Revista de estudios literarios 26 (2004) 1-10 Universidad Complutense de Madrid http wwwucmesinfoespeculonumero26sornadahtml

170 JUAN FRANCISCO MAURA

alto contenido eroacutetico con sustantivos y metaacuteforas que recuerdan la maacutes iacutentima unioacuten amorosa en unos casos y el tierno amor maternal en otros

[T]e miro Jesus mio desnudo a las inclemencias del tiempo y ardien-do en puro fuego de Amor por la salud de las Almas y me ensentildeas a que te ame con todo mi corason y puresa de espiritu No atendiendo ni buscando umanos intereses ni a solisitar consuelos ni regalos espi-rituales que suelen empantildear la puresa del noble corason No mi Jesus amable pues antes me ensentildeaste tu puro Amor que desnudo sean [sic] de encaminar mis passos desde el pesebre asta la cuna en donde te miro tan desnudo como el pesebre y todo Sentildeor por mi Amor (Mss 12959 26 hoja 1 v)

El manuscrito (12959 27) de la mencionada serie de tres contiene algunas correccio-nes quizaacute hechas por el confesor o quizaacute por ella misma cuando se dirige con excesiva familiaridad y arrebatado fervor a su Amado148 He escogido el manuscrito (12959 Caja 28) en primer lugar por ser el ejemplo maacutes representativo de su poesiacutea y prosa En este manuscrito encontramos de forma maacutes directa que alegoacuterica toda la frescura de un diaacutelogo entre Jesuacutes y el alma que raya como diriacutea Cervantes laquoa la llana y sin rodeosraquo (667 lib 2 cap 38) con el doloroso y a veces desesperado deseo de la entrega y la unioacuten final con el Amado La ortografiacutea no ha sido corregida respetaacutendose el texto ori-ginal149 Veamos el siguiente fragmento

Mira que te amo con Amor de padre y con Amor de esposo el mas fino y puro enamorado que no tan solo me presio de darte mi mano sino tambien todo mi cuerpo y sangre para que con mi pan de vida te sustentes y te regales a tus anchuras y que con mi propio espiritu vivas en paz como tu lo deseas y que mis amores sean unico alivio en tus trabajos en esta mortal vida pues si esto es asi y sabes que muero por darte vida dime esposa mia de que te fatigas Dame querida tus bras-sos y dime si me amas como yo te amo (Hoja 4)

148 La antologiacutea de Promis ha procurado insertar entre los textos antoloacutegicos algunos que se refieren a la es-critura de mujeres fundamentalmente de aquellos generados en el interior de los espacios conventuales Estos textos se fundan como laquohistorias de vidasraquo y responden casi siempre a los requerimientos de los confesores de las monjas coloniales En este sentido resulta valiosiacutesima la incorporacioacuten de la llamada Relacioacuten autobiograacute-fica de Sor Ursula Suaacuterez como una muestra significativa de la escritura monjil entendida en esta eacutepoca (como tambieacuten en la tradicioacuten europea medieval) inserta en las denominadas laquolabores de manoraquo de las religiosas ya que el texto escrito por mandato se convertiacutea en una suerte de entramado o tejido linguumliacutestico es decir en un nuevo bordado que la mayor parte de las veces el confesor convertido en censor iba haciendo tachando y enmendando En la antologiacutea Promis agrega un texto de Sor Tadea Garciacutea de la Huerta titulado Relacioacuten de la inundacioacuten que hizo el riacuteo Mapocho de la ciudad de Santiago de Chile en el monasterio de Carmelitas titular de San Rafael el diacutea 16 de junio de 1783 se trata de un poema tipo romance escrito en versos octosilaacutebicos y que da cuenta de lo sucedido ese diacutea en el convento (Resentildea de la literatura del reino de Chile de Joseacute Promis Eddie Morales Pintildea httpwwwupaclpublicaciones2002literatura_promishtm)

149 Son frecuentes las faltas ortograacuteficas Una de ellas es el uso constante del seseo La ausencia de acentua-cioacuten y puntuacioacuten exceptuando alguacuten punto o coma arbitrario no seguido casi nunca de mayuacutescula inicial lo mismo que el uso igualmente aribitrario de la h o de b v r q g j m n x etc No olvidemos de la misma forma la laxitud linguumliacutestica existente en el siglo XVII (no sabemos a queacute parte de eacuteste pertenece el manuscrito) asiacute como la joven edad de la monja

171ESPANtildeOLAS DE ULTRAMAR EN LA HISTORIA Y EN LA LITERATURA

Los versos del presente manuscrito poseen la misma fuerza que tiene su prosa Con una estructura estroacutefica indefinida estaacuten aparentemente corregidos por alguien que tu-vo la oportunidad de conocer personalmente a la autora Muy probablemente se trate del padre al que hace referencia al principio del primer manuscrito laquoMandame el Pd que le declare en que consiste un verdadero amor a Diosraquo a continuacioacuten continuacutea con su caracteriacutestica humildad laquo[O]bedesere y dire lo q Dios me inspire segun mi rudesa y simplisidadraquo (Mss 12959 26) En cuanto a la fuerza pasional de esta joven observamos con cierta tristeza coacutemo aparece sublimada en sus escritos con toda la enegiacutea de una joven mujer llena de intensidad y vida pero encerrada en los liacutemites de un convento Veamos un ejemplo en donde responde el Alma en los siguientes versos

O mi enamorado Jesus O mi dulse y tierno amanteO alegria de los sielos O dulse Jesus amable

(Toda Sentildeor me derrito toda Sentildeor me desagoy quiero vivir por ti ea sentildeor abrasadme) [Tachado en el original]

Toda Sentildeor me derrito toda Sentildeor me desagoy quiero morir por vos ea Sentildeor que ya acabo

Ya tus amores me llaman ya tus perfumes me traencon suspiros y agonias Sentildeor hasta que te alcanse

O mi Jesus amoroso no puedo mas dilatarmeya la pasiensia me falta dulse Jesus abrasadme

(No puedo vivir sin vos no puedo mas dilatarmeya la pasiensia me falta dulse) [Tachado en el original]

No puedo vivir sin vos mi dulse Jesus amablepues me teneis echisada siendo mi esposo y mi Padre

Ay que me abraso Ay que me quemo del Amor deJesus nasareno como no tocan y tantildeen a fuego150

Estos versos llenos de arrebato sublimado conectan con toda la tradicioacuten miacutestica es-pantildeola que se remonta a Ramoacuten Llul y que culmina en el maacutes universal de nuestros

150 En toda la fuerza y simbologiacutea del amor maacutes iacutentimo del maacutes alto y sublime placer de la unioacuten de los amantes tal como lo encontramos en el Cantar de los Cantares y en San Juan de la Cruz Leemos en la Biblia

Ya me he quitado la tuacutenica iquestCoacutemo volver a vestirme Ya me he lavado los pies iquestCoacutemo volver a ensuciarlosMi amado metioacute su mano por el agujero (de la llave) y mis entrantildeas se estremecieron por eacutel Me levanteacute para abrir a mi amado Mis manos destilaron mirra y mis dedos mirra exquisita en el pestillo de la cerradura (5 3-5)

Nos ocurre lo mismo con San Juan de la Cruz en su insuperable poema laquoLlama de amor vivaraquo

iexclOh cauterio suaveiexclOh regalada llagaiexclOh mano blanda iexclOh toque delicadoque a vida eterna sabey toda deuda pagaMatando muerte en vida la has trocado

172 JUAN FRANCISCO MAURA

miacutesticos San Juan de la Cruz Esta tradicioacuten se extiende hasta finales del siglo XVII esto es hasta los finales del Barroco siendo un poco maacutes tardiacuteo en la Ameacuterica espantildeola Sin tener como propoacutesito discutir en el presente trabajo a queacute corriente miacutestica pertenece la obra de Sor Nada es necesario resaltar no obstante el hecho de que estaacute escrito por una mujer y ademaacutes de tierna edad El manuscrito 12959 Caja 26 termina con estas pa-labras laquo[T]odas estas boverias escrivi por entretenimiento siendo resien profesa en la religion Sor Nadaraquo Mas no por la juventud de su autora los escritos dejan de tener lo-gradas metaacuteforas imaacutegenes y siacutembolos sacados de la naturaleza La alegoriacutea de la unioacuten matrimonial poseeacute el fuego liacuterico de la maacutes apasionada de las relaciones amorosas vivi-ficada por perfumes flores insectos animales escarchas nieves o abrojos Por lo tanto aunque la narracioacuten destile cierta ingenuidad no carece por ello de un vocabulario rico con el sabor popular de la poesiacutea de los cancioneros y romances de tradicioacuten renacen-tista No ha sido otra mi intencioacuten que la de rescatar del olvido unos escritos en prosa y en verso llenos de frescura y espontaneidad que nos muestran la pasioacuten con que la joven novicia se laquoentrega en cuerpo y almaraquo a los menesteres de su profesioacuten guiada por un padre espiritual en esos primeros antildeos de formacioacuten Esta ha sido la razoacuten por la que presento a continuacioacuten el citado manuscrito en su totalidad

Sor Nada (Mss 1295928)

laquoEsplicacion sobre en que consiste la paz del AlmaraquolaquoQuartillas a un Alma que padece soledad interiorraquo

[7 hojas utiles en 4ordm letra del siglo XVII]

+

Esplicacion sobre en que consiste la paz del Alma

Pareseme segun mi rudo entender que la verdadera paz del Alma con-siste en una muy pura y buena consiencia en un corason liso y bien intensionado en una verdadera rectitud de espiritu en el qual el Alma procura bolar a Dios sin jamas detenerse a respetos umanos ni reparar en que me diran ni de que me censuraran sino me apresuro a seguir a unos entenderes y pareseres dorados en los quales pretende el mundo engantildear y ensuciar si se puede la puresa de un corason unicamente de Dios y de su Santa ley y se lo conserva cristalino con la divina asis-tencia de la gracia y comprendido de su Amor y temor siguiendo la luz divina de tan amante Sentildeor Dios y ombre verdadero con que este ilustrado corason ni se altera ni se mueve por los disfrasses dorados que ase el mundo y sus moradores mayormente con falssas amistades aunque con ellos muestre buena intension Con la misma grasia y luz de Dios conose el buen corason estos disfrasses que le ase el mundo y se retira de todo con espiritu y valor esto sin la menor alterasion sino que en suma paz se retira a buscar a Dios dentro de su mismo corason

173ESPANtildeOLAS DE ULTRAMAR EN LA HISTORIA Y EN LA LITERATURA

y se abrasa con su pura verdad en la qual se le descubren mil interio-res secretos tan solidos puros y verdaderos que la misma Alma queda abismada y de puro grandes no los puede bien comprender ni esplicar pero estos mismos secretos divinos le sirven de espuelas para no solo correr sino bolar con pies de plumas en seguimiento de su bien ama-do Jesus y como este soberano Sentildeor es tan amante de sus espossas las Almas luego que la ve bolar con pies de plumas la sale al encuen-tro en despoblado campo que se deve de llamar Campo de Amor de Dios y el mismo Sentildeor se viene a las manos por ser Dios que nos ama con Amor infinito de Padre benigno y amoroso con que asiendose en contra deso este divino enamorado en lo interyor de el Alma que le busca con ansias de servirle y amarle y en aquella soledad traban una conversasion amorosa y sensilla como la pluma simple de quien esto escrive

Divino enquentroDios y el Alma en la soledad

O Soberano Principe de la paz dise el Alma tus perfumes me traen a ti bolando porque alla en el mundo y sus valedores me pretendian engantildear y entretenerme con pegaminossas amistades que facilmen-te me pudieran envenenar y matarme apartandome de ti Mi dulse Jesus amable mi Redentor Soberano que con tantas ansias me sales al enquentro como siervo [ciervo] erido de mis Amores los quales tu Amor me ofrese para que con tu mismo Amor te ame y te sirva en paz sin perturbarme ni contristarme ni cansarme de padeser pasando si se ofrese por escarchas nieves espinas ni abrojos ni por otros diverssos trabajos ni piedras de contradision que tu me puedes permitir pues por mas que el mar se levante con sus ferosses olas contra mi ni piedras se me tiren al rostro en todo Sentildeor me quieres con serenidad pasifica sin la menor perturbasion Todo Sentildeor quieres que lo tome con Serenidad de espiritu y asi vengo a ti bolando para que mejor me ensentildees a vivir segun las leyes de tu noble condision que me son muy agradables por mas que el mundo me las despresie por segir sus vanidades y torsidas intensiones con apariensias de bien y con este engantildeo y bien me quie-ro mas a mi que no a mi proximo veo que segun mi pareser se pierden muchas Almas y tambien de aquellos que se depresian y pasan por muy espirituales Con que me paresen pocos los que llegan a padeser con desnudes151 de espiritu por tu purisimo Amor y me parese essas se quedan muy atrasadas en la virtud por el peligro de bolver muy atras el paso de modo que se pueden despentildear y pereser en su misma desgra-sia ya por soberbia o por otras enfermedades que se les pega al corason y asi lo pasan como siegos ignorantes sin advertir en sus peligros

151 La letra en cursiva es miacutea

174 JUAN FRANCISCO MAURA

este aquerdo Sentildeor y otros que tu verdad me ensentildea me ase venir uyendo de las paredes del mundo y me vengo a ti Dios mio bolando con las dos Alas del Amor y temor que tu mismo Amor me ofrese tan de gracia y tan de grado que no se duentildeo mio con que lo responder a tan soberano beneficio y finesa de tus entrantildeas de Amorvengo Sentildeor y esposo mio unicamente a descansar en ti pues los peli-gros del camino me an puesto en mucho sobresalto temiendo el per-derte y sin ti perderme para siempre por una eternidad sin fin pues deseo amado mio ganarme ganandote a ti y vivir en ti aora en vida y despues eternamente y estos cuidados me traen fatigada molida y cansada y no podre tener alivio y descanso sino viendome entre tus brassos aunque sea estando en cruz pues ese es el fin de mis deseos vivir y morir en ti ablame mi cordero manso y ensentildeame a que ver-daderamente te ame como fiel esposa ea mi caro amigo dame la ma-no pues sabes Amor mio que en mi no ay mano sin tu misma mano y asi mi Dios y Sentildeor mi Principe Soberano con umilde rendimiento y deseos de alcansarte te suplico me des la mano y me consueles en estos mis trabajos Deseo Sentildeor vivir en paz y los malos amores de mi Naturaleza flaca no me dejan detentar y no quieren por mi desgrasia atropellar con las leyes de tu Amor ni quisiera perturbar mi corason quando me veo con un torvellino de olas y contratiempos que a menu-do me suelen sercar pero si tu Sentildeor me das la mano nada temo sino que me aseguro y vivire en paz sin que me fatiguen los contratiempos pues mi mano en la tuya y mi espiritu en el tuyo por mas borrascas que me envistan no seran bastantes para rendir mi voluntad a la suya bien si para pronunsiar un fiat que resuene bien atras en tus oidos y que en medio de mis fatigas me ponga a cantar tus divinas misericor-dias hea Sentildeor ya pretendo serrar mis labios por no desir mas bove-rias y deseo Sentildeor oir tus palabras de vida eterna abla Sentildeor que tu sierva oye con atension y cuydado mira mi Dios que se me ase tarde y espero con prisa deseando saborearme y aprovecharme de los ecos de tu Santa dotrina pues todas tus palabras saben a eterna vida callen pues mis sentidos y potensias y todo se ponga en paz pues mi dulse y soberano Sentildeor no se escusara de ablar me aun que en mudo silensio hea mi gran Prinsipe de la paz ablame que tus puros amores me traen perdida por estos asperos montes y mis cortos pasos no te pueden dar alcanse mirame mi Dios a tus pies postrada como un vil gusano y me-nor ormiga de la tierraabla Jesus y dise a su esposa el Alma querida esposa mia que me pides y por que te muestras tan fatigada y mal sufrida no vives como corde-rita del campo buscando de mis pechos el sustancial pasto mi Amor no te sustenta y mi grasia te promete eterna vida pues dime amada de que te fatigas y te muestras mal sufrida mira que te amo con Amor de padre y con Amor de esposo el mas fino y puro enamorado que no tan solo me presio de darte mi mano sino tambien todo mi cuerpo y

175ESPANtildeOLAS DE ULTRAMAR EN LA HISTORIA Y EN LA LITERATURA

sangre para que con mi pan de vida te sustentes y te regales a tus an-churas y que con mi propio espiritu vivas en paz como tu lo deseas y que mis amores sean unico alivio en tus trabajos en esta mortal vida pues si esto es asi y sabes que muero por darte vida dime esposa mia de que te fatigas Dame querida tus brassos y dime si me amas como yo te amoResponde el Alma152 Tu mi Dios sabes si yo te amo pues de mi solo se que mis deseos y ansias buelan a ti mas no alcanso a saber si te amo como tu de-seas ser amado y como desconfio tanto de mi y de mis prosederes falssos temo Dios mio perderme y perderte y asi Sentildeor pues no desechas mis Amores y te muestras tan fino en amarme te pido me ensentildees a vivir segun las leyes de tu pura verdad y fina condisionhija mia dise Dios la prueva de un verdadero Amor consiste en sufrir callar y padeser por mi unico Amor y en todo seguir mis pasos sin ja-mas retroseder por mas fragoso que se muestre el camino pues nunca seran tantas las espinas las escarchas ni las nieves ni los vientos bo-rrascosos que te se ofrescan pasar por mi Amor como los que mi tierno y desinteresado Amor paso por ti y siempre con mis pies descalssos y asi hija y esposa mia muestrate costante en seguir lo perfecto de mis passos pues mi braso fuerte sera en ti y peleara por ti y te sera el todo en tus nesesidades y mi Amor te convertira en dulse y suave lo amargo y molesto a la condision de la carrne

Responde el Alma

O mi enamorado Jesus O mi dulse y tierno amanteO alegria de los sielos O dulse Jesus amable

(Toda Sentildeor me derrito toda Sentildeor me desagoy quiero vivir por ti ea sentildeor abrasadme) [Tachado en el original]

Toda Sentildeor me derrito toda Sentildeor me desagoy quiero morir por vos ea Sentildeor que ya acabo

Ya tus amores me llaman ya tus perfumes me traencon suspiros y agonias Sentildeor asta que te alcanse

O mi Jesus amoroso no puedo mas dilatarmeya la pasiensia me falta dulse Jesus abrasadme

(No puedo vivir sin vos no puedo mas dilatarmeya la pasiensia me falta dulse) [Tachado en el original]

No puedo vivir sin vos mi dulse Jesus amablepues me teneis echisada siendo mi esposo y mi Padre

152 La aparicioacuten de una mayuacutescula al principio de una oracioacuten es algo totalmente arbitrario en este ma-nuscrito dada la libertad ortograacutefica de la autora Como se puede observar en la mayor parte de las veces no es el caso

176 JUAN FRANCISCO MAURA

Ay que me abraso Ay que me quemo del Amor deJesus nasareno como no tocan y tantildeen a fuego

Responde Jesus Hija mia tus simples vozes oygo y aunque resuenan bien a mis oidos pero te deseo mas mansa y pasifica en tus fervores ya sabes que no siempre as de vivir en mantillas ni a los pechos de tu Madre por que es rason que padescas con espiritu fuerte como mu-jer valerosa por que a una esposa del Rey soberano y prinsipe de la paz no le estan bien chiquerias ni fervores de nintildea malcriada y ya es ora que la destete su Madre la Naturaleza y que empesando su nueva vida camine con el favor de mi grasia sigiendo mis passos de eterna vida esto con sus pies descalssos segun mis leyes de Amor puro y desinteresado lo tienen ordenado153 y vivir en paz como lo deje en-cargado a mis apostoles Santos repitiendoles varias vezes Vivir en pas y caridad esto es un vivir en Dios y Dios en el Alma y asi hija mia el Alma que vive en paz vive en mi Como mis cortesanos en el cielo y pues me pides que te ensentildee a vivir segun las leyes de mi condision Repito el desir que te debes mostrar sufrida en todo tiempo y estado sin permitir en tu corason que ni aun los fervores se adelanten con estremos ni ademanes sino atiende y aprende de mi purisima Madre pues siempre la veras si bien lo consideras que mientras vivio en el mundo en todos sus trabajos se mostro firme fuerte costante como piedra diamante Pues mirandome nintildeo entre sus brasos desnudo en el pesebre desnudo y crusificado en los brassos de una cruz En estos y otros passos no se mudo su rostro sino que en suma serenidad y pasifico corason toda se sacrificaba enteramente en los brassos de mi Amor y rendido su corason y voluntad en la de mi eterno Padre por ejemplo te la doy y deseo que aprendas de sus nobles calidades pues te aseguro carisima que las leyes de mi condision y pura verdad todo lo allaras enserrado en el corason de mi purisima Madre sedle fiel y descansaras en paz

+

Quartillas a un alma que padese soledad interior

1Un Alma afligida y tristese ve en un campo desiertay en el su esposo la tieneAtormentada y sedienta

153 Es a traveacutes de estas liacuteneas lo que hace suponer que la autora de este diaacutelogo amoroso entre el Alma y Je-suacutes es novicia esto es laquoque estaacute empesando su nueva vidaraquo En las mismas liacuteneas una vez maacutes se hace alusioacuten al laquodesteteraquo de su vida civil laquoa una esposa del Rey soberano y principe de la paz no le estan bien chiquerias ni fervores de nintildea malcriada y ya es ora que la destete su Madre la naturalesaraquo (fol 5)

177ESPANtildeOLAS DE ULTRAMAR EN LA HISTORIA Y EN LA LITERATURA

2Pendiente se ve en el AyreSolo un hilo la sustentasin tocar el pie en el sueloporque del no tome tierra

3Mirandola esta yto a ytoaquel sol que la atraviesay la enviste con sus rayosmas ella no pestantildeea

4Como sigarra padese y como a tal se atormentabatiendo sus mismas Alasy el corason se atraviesa

5Con penas sustos temoresquando se mira assi mesmasin tener valor en nadaporque es la misma flaquesa

6Pero el Amor de su esposotoda su atension le llevay la pone en un abismopero cubierto en tiniebla

7Desea dar algun bueloy subir con ligeresapero se mira travadacon una fuerte cadena

8Clama suspira y padeseMas del todo se sujetaRindiendo su voluntadA la divina clemencia

9Los enemigos del AlmaCruelmente le asen guerray ella aunque firme y constantelos reselos la atormentan

178 JUAN FRANCISCO MAURA

10de todos modos padeseaunque gosa la asistensiadel divino esposo amadoque en su interior se recrea

11Solo de verla penary con verla tan serenadise resibe mil gustosde su sigarra pequentildea

12Le sabe el mundo a mil yelesy su trato le atormentaviendo en el mil falsedadesque todas saben a tierra

13Para poderse librardeja de correr y buelacon las Alas del Amory el mismo Amor se la lleva

Una vida dedicada a un amor divino un amor que le haraacute llenar un buen nuacutemero de cuartillas dedicadas a tan alta empresa Se desconoce si la vocacioacuten de Sor Nada con-tinuoacute con tanta intensidad el resto de sus diacuteas Ciertamente la vida en el covento no era faacutecil En algunos casos la experiencia era traumaacutetica incluso fatal para algunas de las adolescentes de la Ameacuterica Espantildeola Las reglas del claustro eran severas por varias razones Estas joacutevenes si no teniacutean el permiso de la superiora no podiacutean recibir visitas no podiacutean volver a sus casas su correspondencia era censuraba y no podiacutean salir del periacutemetro conventual Igualmente se levantaban antes del amanecer para oir misa tra-bajaban el resto del diacutea y lo maacutes interesante es que muchas veces esta vida era aceptada por muchas

Page 37: Tercera parte: Mujeres en la vida intelectual - …parnaseo.uv.es/Editorial/Maura/TerceraParte.pdf · La Biblia, por su parte, hace repetidas menciones de la mujer y sobre el comporta-

167ESPANtildeOLAS DE ULTRAMAR EN LA HISTORIA Y EN LA LITERATURA

a cabo en 1614 por el marqueacutes de Montesclaros era una ciudad de 25000 habitantes de los que 11000 eran espantildeoles El nuacutemero de religiosos y religiosas llegaba a 1720 (Pittaluga 77)

Se sabe que en la Isla de Santo Domingo durante el siglo XVI nacioacute o al menos resi-dioacute una poeta de ceacutelebre apellido en los aconteceres del Nuevo Mundo Dontildea Elvira de Mendoza de la que se conserva un manuscrito en la Real Academia de la Historia laquoCantares miacuteos que estaacuteis rebeladosraquo Eugenio de Salazar hace un elogio de ella como poeta en un Soneto a la ilustre Poeta y Sentildeora Dontildea Elvira de Mendoza moradora en la ciudad de Santo Domingo (Serrano y Sanz 270 53)

Nacida en Burgos sobre el antildeo 1590 dontildea Luisa de Padilla merece un lugar aparte dentro del grupo de mujeres escritoras de su eacutepoca Por su estilo faacutecil y castizo su no-vedad de pensamientos y su rica erudicioacuten recibioacute el siguiente comentario de Manuel Serrano y Sanz laquoPocas figuras hay en nuestra historia literaria femenil que puedan compararse a esta eminente prosista acaso la maacutes notable de cuantas florecieron en Es-pantildea durante el siglo XVIIraquo (Serrano y Sanz 270 95-96) Este comentario y comparacioacuten deberiacutea ampliarse para que tambieacuten incluyese a laquola historia literaria varonilraquo

Dontildea Luisa fue defensora de la labor que la Inquisicioacuten estaba realizando en la laquolim-piezaraquo de mujeres laquosoldados del demonioraquo que existieron en algunas provincias espa-ntildeolas en aquel tiempo Muchas de las mujeres que combinaban la magia con los po-deres curativos fueron condenadas no solamente por hombres de la Inquisicioacuten sino tambieacuten por mujeres de todas las clases sociales como es el caso de Luisa de Padilla condesa de Aranda En su obra Elogios de la verdad e invectiva contra la mentira preveniacutea contra aquellos que practicaban artes en contra de la religioacuten cristiana La magiacutea negra seguacuten Padilla era la causante de que muriesen casi tantas personas como otras causas naturales habieacutendose descubierto hasta seis mil brujas en Vizcaya y Guipuzcua con-fesando una mujer de un pueblo pequentildeo haber matado con su laquomagiaraquo a ochocientas personas (Perry 31) Eran estos laquomales de ojoraquo y maldiciones seguacuten la autora las causas de que se secasen los pechos de las madres lactantes que se separasen las parejas casa-das y que abortasen las embarazadas (Perry 31)

Si se tiene en cuenta que dontildea Luisa estuvo emparentada con la maacutes rancia aristocra-cia de su tiempo o lo que es lo mismo con algunos de aquellos que en cierta manera dirigiacutean los destinos de Espantildea en aquella eacutepoca (Duques de Lerma Duque de Uceda Marqueacutes de Cueacutellar Conde de Santa Gadea Marqueacutes de Belmonte por citar algunos) se comprenderaacute mejor su identificacioacuten con una institucioacuten que en teoriacutea velaba por la salvaguarda de los valores laquoeternosraquo de una Espantildea destinada a ser la campeona del ca-tolicismo durante los siglos XVI y XVII El padre de dontildea Luisa fue don Martiacuten de Padilla y Manrique extraordinario militar que proboacute su valor contra enemigos moriscos ingle-ses holandeses piratas berberiscos y el renegado genoveacutes Muley Faxad Fue veterano de la batalla de Lepanto donde apresoacute a cuatro galeras y acompantildeoacute con su escuadra a la reina Dontildea Margarita de Austria cuando vino de Geacutenova en 1598 laquoHabiacutea obtenido a 24 de julio de 1587 el tiacutetulo de Conde de Santa Gadea y en 1596 el de Capitaacuten General de la Armada del mar Oceacuteanoraquo (Serrano y Sanz 27095-96)

Por otra parte tambieacuten se sabe que dontildea Luisa participoacute directamente y desde tem-prana edad en la praacutectica de algunas actividades intelectuales como la historia y la arqueologiacutea a la vez que dedicaba su tiempo a virtudes cristianas como la caridad y el socorro de los necesitados (Serrano y Sanz 270 97) Resulta mucho maacutes faacutecil compren-

168 JUAN FRANCISCO MAURA

der la postura ideoloacutegica de esta gran mujer si tienen en cuenta ademaacutes de los factores antes mencionados otros tantos de caraacutecter biograacutefico concernientes a su educacioacuten y matrimonio

Otra escritora fue la mexicana dontildea Mariacutea Casilda Pozo natural de Temestla (Meacutexi-co) Nacida en el mes de abril de 1682 dejoacute escrita su biografiacutea en 16 cuadernos el ma-nuscrito original se encuentra en la biblioteca del colegio de San Gregorio de Meacutexico Fue su confesor el jesuiacuteta Domingo Quiroga que fue quieacuten la incitoacute a escribir su obra (Serrano y Sanz 270 137) Sor Juana de San Antonio aparece a principios del siglo XVII formando parte de un grupo de religiosas espantildeolas que fueron a Manila por la ruta de Meacutexico Ademaacutes de distinguirse por sus cualidades personales su obra interesa por ofrecer informacioacuten testimonial y costumbrista acerca de la forma de vestir de chinos y japoneses (Serrano y Sanz 270 225)

Otra monja esta vez ecuatoriana fue Gertrudis de San Ildefonso Nacida en 1652 profesoacute su vocacioacuten en el convento de Santa Cruz de Quito dejando escrita su vida por mandato de su confesor el padre Martiacuten de la Cruz el cual hizo una biografiacutea laquoen tres gruesos voluacutemenesraquo Gertrudis de San Ildefonso murioacute en 1709 (Serrano y Sanz 270 300) en olor de santidad

Sor Mariacutea Ana Agueda de San Ignacio nacioacute el 3 de marzo de 1695 en la dioacutecesis de la puebla de los Angeles en un rancho del lugar de Santiago Tecaliacute (Serrano y Sanz 270300) Esta monja mexicana escribioacute varias obras durante su vida conventual a lo largo de la cual desempentildeoacute el cargo de priora por muchos antildeos Entre sus obras todas de caraacutecter piacuteo y de laquoamor divinoraquo escribioacute un curioso y laquocopiosoraquo tratado de la Leche virginal de la Soberana Madre de Dios El padre Fr Juan de Villa Saacutenchez hace el siguiente comentario al respecto laquoen que hablando primero en sentido natural de los beneficios que debemos a Nuestra Sentildeora pasa a tratar en sentido miacutestico y alegoacuterico enten-diendo en la leche la doctrinaraquo (Serrano y Sanz 270301) Mexicana fue tambieacuten Sor Petronila de San Joseacute que ejercioacute como abadesa del Real monasterio de Jesuacutes Mariacutea de la ciudad de Meacutexico Escribioacute Vidas de varias religiosas ejemplares obra que tiene su im-portancia ya que al parecer laquoDe esta obra se sirvioacute D Carlos de Siguumlenza y Goacutengora para escribir su Parayso Occidental (Meacutexico 1684) seguacuten eacutel mismo declara en el proacutelogo diciendo lsquoa quien si hay algo bueno en esta historia se le debe todorsquoraquo (Serrano y Sanz 270 354) Menos conocida fue su compatriota Sor Luisa de Santa Catalina natural de Xacona laquopueblo situado en las inmediaciones de Zamora (Meacutexico)raquo siendo bautizada en 1682 Escribioacute Cartas espirituales a su confesor el P Juan Loacutepez de Aguado (Serrano y Sanz 270 361-62)146

Todos estos escritos la mayoriacutea de ellos ignorados por el gran puacuteblico tienen la im-portancia de darnos una perspectiva diferente En otras palabras ensentildearnos la maacutes refinada sensibilidad de muchas mujeres que permanecieron y en su mayoriacutea siguen permaneciendo a laquooscurasraquo de una eacutepoca tan rica de la literatura espantildeola como fue el Siglo de Oro Este siglo fue tambieacuten en su dimensioacuten literaria y artiacutestica patrimonio de la mujer

146 Para profundizar en muchas de estas escritoras hispano-americanas la consulta de la Biblioteca Hispano-Americana de Beristain de Souza resulta de capital importancia

169ESPANtildeOLAS DE ULTRAMAR EN LA HISTORIA Y EN LA LITERATURA

Sor Nada ardores divinos de una monja adolescente escritos ineacutedi-tos de una recieacuten profesa del siglo XVI147

iexclQueacute encantadores son tus amores hermana miacutea espo-sa iexclQueacute deliciosos son tus amores maacutes que el vino Y el aroma de tus perfumes es mejor que el de los baacutelsamos Miel virgen destilan tus labios esposa miel y leche hay en tu lengua y el perfume de tus vestidos es como aroma de incienso (Cantar de los Cantares 4 10-11)

Sor Nada llamada asiacute por humildad seguacuten dice el Indice de manuscritos de la Biblio-teca Nacional de Madrid es uno de los ejemplos maacutes desconocidos e interesantes que tenemos de la poesiacutea y prosa amoroso-religiosa del siglo XVII Hasta la fecha nunca se habiacutea publicado su obra e incluso hasta el antildeo 1995 para mi sorpresa no habiacutea copias microfilmadas de sus manuscritos en la Biblioteca Nacional Serrano y Sanz en su libro Apuntes para una Biblioteca de Escritoras Espantildeolas hace una escueta y pasajera mencioacuten de esta mujer y de su obra (68-69) siendo eso todo lo que hasta ahora se sabiacutea de ella Sus escritos consisten en los siguientes manuscritos

1 laquoEn queacute consiste un verdadero amor de Diosraquo 9 hojas uacutetiles en 4ordm letra del siglo XVII Biblioteca Nacional de Espantildea Manuscrito 1295926

2 laquoPintura del Propio Amorraquo laquoPintura del propio Amorraquo 10 hojas uacutetiles en 4ordm letra del siglo XVII Biblioteca Nacional de Espantildea Manuscrito 1295927

3 laquoEsplicacioacuten sobre en queacute consiste la paz del Almaraquo laquoQuartillas aacute un Alma que padece soledad interiorraquo 7 hojas uacutetiles en 4ordm letra del siglo XVII Biblioteca Nacio-nal de Espantildea Manuscrito 1295828

En cuanto a su persona soacutelo se nos dice que laquose encubrioacute con este seudoacutenimo laquoSor Nadaraquo Esta monja desconocida de origen hispanoamericano posee toda la frescura e ingenuidad de una joven apasionada metida por vocacioacuten u obligacioacuten a ejercer la profesioacuten maacutes comuacuten para mujeres de cierta clase social de su tiempo En sus liacuteneas podemos encontrar un misticismo simple incluso en algunos momentos infantil pero a su vez lleno de una fuerza y sensualidad interior poco comuacuten en escritos de este geacute-nero que desborda los liacutemites del laquoamor divinoraquo a traveacutes de los diaacutelogos entre el Alma y el Esposo Sor Nada consigue proyectar su amor a Dios maacutes allaacute de una experiencia romaacutentica Su experiencia es sincera y genuinamente miacutestica trascendiendo la imita-cioacuten o la propia creacioacuten poeacutetica ficcionalizada (Hatzfeld 30) Algunos pasajes son de un

147 Veacutease mi artiacuteculo Sor Nada ardores divinos de una monja adolescente escritos ineacuteditos de una monja profesa del siglo XVIIraquo Espeacuteculo Revista de estudios literarios 26 (2004) 1-10 Universidad Complutense de Madrid http wwwucmesinfoespeculonumero26sornadahtml

170 JUAN FRANCISCO MAURA

alto contenido eroacutetico con sustantivos y metaacuteforas que recuerdan la maacutes iacutentima unioacuten amorosa en unos casos y el tierno amor maternal en otros

[T]e miro Jesus mio desnudo a las inclemencias del tiempo y ardien-do en puro fuego de Amor por la salud de las Almas y me ensentildeas a que te ame con todo mi corason y puresa de espiritu No atendiendo ni buscando umanos intereses ni a solisitar consuelos ni regalos espi-rituales que suelen empantildear la puresa del noble corason No mi Jesus amable pues antes me ensentildeaste tu puro Amor que desnudo sean [sic] de encaminar mis passos desde el pesebre asta la cuna en donde te miro tan desnudo como el pesebre y todo Sentildeor por mi Amor (Mss 12959 26 hoja 1 v)

El manuscrito (12959 27) de la mencionada serie de tres contiene algunas correccio-nes quizaacute hechas por el confesor o quizaacute por ella misma cuando se dirige con excesiva familiaridad y arrebatado fervor a su Amado148 He escogido el manuscrito (12959 Caja 28) en primer lugar por ser el ejemplo maacutes representativo de su poesiacutea y prosa En este manuscrito encontramos de forma maacutes directa que alegoacuterica toda la frescura de un diaacutelogo entre Jesuacutes y el alma que raya como diriacutea Cervantes laquoa la llana y sin rodeosraquo (667 lib 2 cap 38) con el doloroso y a veces desesperado deseo de la entrega y la unioacuten final con el Amado La ortografiacutea no ha sido corregida respetaacutendose el texto ori-ginal149 Veamos el siguiente fragmento

Mira que te amo con Amor de padre y con Amor de esposo el mas fino y puro enamorado que no tan solo me presio de darte mi mano sino tambien todo mi cuerpo y sangre para que con mi pan de vida te sustentes y te regales a tus anchuras y que con mi propio espiritu vivas en paz como tu lo deseas y que mis amores sean unico alivio en tus trabajos en esta mortal vida pues si esto es asi y sabes que muero por darte vida dime esposa mia de que te fatigas Dame querida tus bras-sos y dime si me amas como yo te amo (Hoja 4)

148 La antologiacutea de Promis ha procurado insertar entre los textos antoloacutegicos algunos que se refieren a la es-critura de mujeres fundamentalmente de aquellos generados en el interior de los espacios conventuales Estos textos se fundan como laquohistorias de vidasraquo y responden casi siempre a los requerimientos de los confesores de las monjas coloniales En este sentido resulta valiosiacutesima la incorporacioacuten de la llamada Relacioacuten autobiograacute-fica de Sor Ursula Suaacuterez como una muestra significativa de la escritura monjil entendida en esta eacutepoca (como tambieacuten en la tradicioacuten europea medieval) inserta en las denominadas laquolabores de manoraquo de las religiosas ya que el texto escrito por mandato se convertiacutea en una suerte de entramado o tejido linguumliacutestico es decir en un nuevo bordado que la mayor parte de las veces el confesor convertido en censor iba haciendo tachando y enmendando En la antologiacutea Promis agrega un texto de Sor Tadea Garciacutea de la Huerta titulado Relacioacuten de la inundacioacuten que hizo el riacuteo Mapocho de la ciudad de Santiago de Chile en el monasterio de Carmelitas titular de San Rafael el diacutea 16 de junio de 1783 se trata de un poema tipo romance escrito en versos octosilaacutebicos y que da cuenta de lo sucedido ese diacutea en el convento (Resentildea de la literatura del reino de Chile de Joseacute Promis Eddie Morales Pintildea httpwwwupaclpublicaciones2002literatura_promishtm)

149 Son frecuentes las faltas ortograacuteficas Una de ellas es el uso constante del seseo La ausencia de acentua-cioacuten y puntuacioacuten exceptuando alguacuten punto o coma arbitrario no seguido casi nunca de mayuacutescula inicial lo mismo que el uso igualmente aribitrario de la h o de b v r q g j m n x etc No olvidemos de la misma forma la laxitud linguumliacutestica existente en el siglo XVII (no sabemos a queacute parte de eacuteste pertenece el manuscrito) asiacute como la joven edad de la monja

171ESPANtildeOLAS DE ULTRAMAR EN LA HISTORIA Y EN LA LITERATURA

Los versos del presente manuscrito poseen la misma fuerza que tiene su prosa Con una estructura estroacutefica indefinida estaacuten aparentemente corregidos por alguien que tu-vo la oportunidad de conocer personalmente a la autora Muy probablemente se trate del padre al que hace referencia al principio del primer manuscrito laquoMandame el Pd que le declare en que consiste un verdadero amor a Diosraquo a continuacioacuten continuacutea con su caracteriacutestica humildad laquo[O]bedesere y dire lo q Dios me inspire segun mi rudesa y simplisidadraquo (Mss 12959 26) En cuanto a la fuerza pasional de esta joven observamos con cierta tristeza coacutemo aparece sublimada en sus escritos con toda la enegiacutea de una joven mujer llena de intensidad y vida pero encerrada en los liacutemites de un convento Veamos un ejemplo en donde responde el Alma en los siguientes versos

O mi enamorado Jesus O mi dulse y tierno amanteO alegria de los sielos O dulse Jesus amable

(Toda Sentildeor me derrito toda Sentildeor me desagoy quiero vivir por ti ea sentildeor abrasadme) [Tachado en el original]

Toda Sentildeor me derrito toda Sentildeor me desagoy quiero morir por vos ea Sentildeor que ya acabo

Ya tus amores me llaman ya tus perfumes me traencon suspiros y agonias Sentildeor hasta que te alcanse

O mi Jesus amoroso no puedo mas dilatarmeya la pasiensia me falta dulse Jesus abrasadme

(No puedo vivir sin vos no puedo mas dilatarmeya la pasiensia me falta dulse) [Tachado en el original]

No puedo vivir sin vos mi dulse Jesus amablepues me teneis echisada siendo mi esposo y mi Padre

Ay que me abraso Ay que me quemo del Amor deJesus nasareno como no tocan y tantildeen a fuego150

Estos versos llenos de arrebato sublimado conectan con toda la tradicioacuten miacutestica es-pantildeola que se remonta a Ramoacuten Llul y que culmina en el maacutes universal de nuestros

150 En toda la fuerza y simbologiacutea del amor maacutes iacutentimo del maacutes alto y sublime placer de la unioacuten de los amantes tal como lo encontramos en el Cantar de los Cantares y en San Juan de la Cruz Leemos en la Biblia

Ya me he quitado la tuacutenica iquestCoacutemo volver a vestirme Ya me he lavado los pies iquestCoacutemo volver a ensuciarlosMi amado metioacute su mano por el agujero (de la llave) y mis entrantildeas se estremecieron por eacutel Me levanteacute para abrir a mi amado Mis manos destilaron mirra y mis dedos mirra exquisita en el pestillo de la cerradura (5 3-5)

Nos ocurre lo mismo con San Juan de la Cruz en su insuperable poema laquoLlama de amor vivaraquo

iexclOh cauterio suaveiexclOh regalada llagaiexclOh mano blanda iexclOh toque delicadoque a vida eterna sabey toda deuda pagaMatando muerte en vida la has trocado

172 JUAN FRANCISCO MAURA

miacutesticos San Juan de la Cruz Esta tradicioacuten se extiende hasta finales del siglo XVII esto es hasta los finales del Barroco siendo un poco maacutes tardiacuteo en la Ameacuterica espantildeola Sin tener como propoacutesito discutir en el presente trabajo a queacute corriente miacutestica pertenece la obra de Sor Nada es necesario resaltar no obstante el hecho de que estaacute escrito por una mujer y ademaacutes de tierna edad El manuscrito 12959 Caja 26 termina con estas pa-labras laquo[T]odas estas boverias escrivi por entretenimiento siendo resien profesa en la religion Sor Nadaraquo Mas no por la juventud de su autora los escritos dejan de tener lo-gradas metaacuteforas imaacutegenes y siacutembolos sacados de la naturaleza La alegoriacutea de la unioacuten matrimonial poseeacute el fuego liacuterico de la maacutes apasionada de las relaciones amorosas vivi-ficada por perfumes flores insectos animales escarchas nieves o abrojos Por lo tanto aunque la narracioacuten destile cierta ingenuidad no carece por ello de un vocabulario rico con el sabor popular de la poesiacutea de los cancioneros y romances de tradicioacuten renacen-tista No ha sido otra mi intencioacuten que la de rescatar del olvido unos escritos en prosa y en verso llenos de frescura y espontaneidad que nos muestran la pasioacuten con que la joven novicia se laquoentrega en cuerpo y almaraquo a los menesteres de su profesioacuten guiada por un padre espiritual en esos primeros antildeos de formacioacuten Esta ha sido la razoacuten por la que presento a continuacioacuten el citado manuscrito en su totalidad

Sor Nada (Mss 1295928)

laquoEsplicacion sobre en que consiste la paz del AlmaraquolaquoQuartillas a un Alma que padece soledad interiorraquo

[7 hojas utiles en 4ordm letra del siglo XVII]

+

Esplicacion sobre en que consiste la paz del Alma

Pareseme segun mi rudo entender que la verdadera paz del Alma con-siste en una muy pura y buena consiencia en un corason liso y bien intensionado en una verdadera rectitud de espiritu en el qual el Alma procura bolar a Dios sin jamas detenerse a respetos umanos ni reparar en que me diran ni de que me censuraran sino me apresuro a seguir a unos entenderes y pareseres dorados en los quales pretende el mundo engantildear y ensuciar si se puede la puresa de un corason unicamente de Dios y de su Santa ley y se lo conserva cristalino con la divina asis-tencia de la gracia y comprendido de su Amor y temor siguiendo la luz divina de tan amante Sentildeor Dios y ombre verdadero con que este ilustrado corason ni se altera ni se mueve por los disfrasses dorados que ase el mundo y sus moradores mayormente con falssas amistades aunque con ellos muestre buena intension Con la misma grasia y luz de Dios conose el buen corason estos disfrasses que le ase el mundo y se retira de todo con espiritu y valor esto sin la menor alterasion sino que en suma paz se retira a buscar a Dios dentro de su mismo corason

173ESPANtildeOLAS DE ULTRAMAR EN LA HISTORIA Y EN LA LITERATURA

y se abrasa con su pura verdad en la qual se le descubren mil interio-res secretos tan solidos puros y verdaderos que la misma Alma queda abismada y de puro grandes no los puede bien comprender ni esplicar pero estos mismos secretos divinos le sirven de espuelas para no solo correr sino bolar con pies de plumas en seguimiento de su bien ama-do Jesus y como este soberano Sentildeor es tan amante de sus espossas las Almas luego que la ve bolar con pies de plumas la sale al encuen-tro en despoblado campo que se deve de llamar Campo de Amor de Dios y el mismo Sentildeor se viene a las manos por ser Dios que nos ama con Amor infinito de Padre benigno y amoroso con que asiendose en contra deso este divino enamorado en lo interyor de el Alma que le busca con ansias de servirle y amarle y en aquella soledad traban una conversasion amorosa y sensilla como la pluma simple de quien esto escrive

Divino enquentroDios y el Alma en la soledad

O Soberano Principe de la paz dise el Alma tus perfumes me traen a ti bolando porque alla en el mundo y sus valedores me pretendian engantildear y entretenerme con pegaminossas amistades que facilmen-te me pudieran envenenar y matarme apartandome de ti Mi dulse Jesus amable mi Redentor Soberano que con tantas ansias me sales al enquentro como siervo [ciervo] erido de mis Amores los quales tu Amor me ofrese para que con tu mismo Amor te ame y te sirva en paz sin perturbarme ni contristarme ni cansarme de padeser pasando si se ofrese por escarchas nieves espinas ni abrojos ni por otros diverssos trabajos ni piedras de contradision que tu me puedes permitir pues por mas que el mar se levante con sus ferosses olas contra mi ni piedras se me tiren al rostro en todo Sentildeor me quieres con serenidad pasifica sin la menor perturbasion Todo Sentildeor quieres que lo tome con Serenidad de espiritu y asi vengo a ti bolando para que mejor me ensentildees a vivir segun las leyes de tu noble condision que me son muy agradables por mas que el mundo me las despresie por segir sus vanidades y torsidas intensiones con apariensias de bien y con este engantildeo y bien me quie-ro mas a mi que no a mi proximo veo que segun mi pareser se pierden muchas Almas y tambien de aquellos que se depresian y pasan por muy espirituales Con que me paresen pocos los que llegan a padeser con desnudes151 de espiritu por tu purisimo Amor y me parese essas se quedan muy atrasadas en la virtud por el peligro de bolver muy atras el paso de modo que se pueden despentildear y pereser en su misma desgra-sia ya por soberbia o por otras enfermedades que se les pega al corason y asi lo pasan como siegos ignorantes sin advertir en sus peligros

151 La letra en cursiva es miacutea

174 JUAN FRANCISCO MAURA

este aquerdo Sentildeor y otros que tu verdad me ensentildea me ase venir uyendo de las paredes del mundo y me vengo a ti Dios mio bolando con las dos Alas del Amor y temor que tu mismo Amor me ofrese tan de gracia y tan de grado que no se duentildeo mio con que lo responder a tan soberano beneficio y finesa de tus entrantildeas de Amorvengo Sentildeor y esposo mio unicamente a descansar en ti pues los peli-gros del camino me an puesto en mucho sobresalto temiendo el per-derte y sin ti perderme para siempre por una eternidad sin fin pues deseo amado mio ganarme ganandote a ti y vivir en ti aora en vida y despues eternamente y estos cuidados me traen fatigada molida y cansada y no podre tener alivio y descanso sino viendome entre tus brassos aunque sea estando en cruz pues ese es el fin de mis deseos vivir y morir en ti ablame mi cordero manso y ensentildeame a que ver-daderamente te ame como fiel esposa ea mi caro amigo dame la ma-no pues sabes Amor mio que en mi no ay mano sin tu misma mano y asi mi Dios y Sentildeor mi Principe Soberano con umilde rendimiento y deseos de alcansarte te suplico me des la mano y me consueles en estos mis trabajos Deseo Sentildeor vivir en paz y los malos amores de mi Naturaleza flaca no me dejan detentar y no quieren por mi desgrasia atropellar con las leyes de tu Amor ni quisiera perturbar mi corason quando me veo con un torvellino de olas y contratiempos que a menu-do me suelen sercar pero si tu Sentildeor me das la mano nada temo sino que me aseguro y vivire en paz sin que me fatiguen los contratiempos pues mi mano en la tuya y mi espiritu en el tuyo por mas borrascas que me envistan no seran bastantes para rendir mi voluntad a la suya bien si para pronunsiar un fiat que resuene bien atras en tus oidos y que en medio de mis fatigas me ponga a cantar tus divinas misericor-dias hea Sentildeor ya pretendo serrar mis labios por no desir mas bove-rias y deseo Sentildeor oir tus palabras de vida eterna abla Sentildeor que tu sierva oye con atension y cuydado mira mi Dios que se me ase tarde y espero con prisa deseando saborearme y aprovecharme de los ecos de tu Santa dotrina pues todas tus palabras saben a eterna vida callen pues mis sentidos y potensias y todo se ponga en paz pues mi dulse y soberano Sentildeor no se escusara de ablar me aun que en mudo silensio hea mi gran Prinsipe de la paz ablame que tus puros amores me traen perdida por estos asperos montes y mis cortos pasos no te pueden dar alcanse mirame mi Dios a tus pies postrada como un vil gusano y me-nor ormiga de la tierraabla Jesus y dise a su esposa el Alma querida esposa mia que me pides y por que te muestras tan fatigada y mal sufrida no vives como corde-rita del campo buscando de mis pechos el sustancial pasto mi Amor no te sustenta y mi grasia te promete eterna vida pues dime amada de que te fatigas y te muestras mal sufrida mira que te amo con Amor de padre y con Amor de esposo el mas fino y puro enamorado que no tan solo me presio de darte mi mano sino tambien todo mi cuerpo y

175ESPANtildeOLAS DE ULTRAMAR EN LA HISTORIA Y EN LA LITERATURA

sangre para que con mi pan de vida te sustentes y te regales a tus an-churas y que con mi propio espiritu vivas en paz como tu lo deseas y que mis amores sean unico alivio en tus trabajos en esta mortal vida pues si esto es asi y sabes que muero por darte vida dime esposa mia de que te fatigas Dame querida tus brassos y dime si me amas como yo te amoResponde el Alma152 Tu mi Dios sabes si yo te amo pues de mi solo se que mis deseos y ansias buelan a ti mas no alcanso a saber si te amo como tu de-seas ser amado y como desconfio tanto de mi y de mis prosederes falssos temo Dios mio perderme y perderte y asi Sentildeor pues no desechas mis Amores y te muestras tan fino en amarme te pido me ensentildees a vivir segun las leyes de tu pura verdad y fina condisionhija mia dise Dios la prueva de un verdadero Amor consiste en sufrir callar y padeser por mi unico Amor y en todo seguir mis pasos sin ja-mas retroseder por mas fragoso que se muestre el camino pues nunca seran tantas las espinas las escarchas ni las nieves ni los vientos bo-rrascosos que te se ofrescan pasar por mi Amor como los que mi tierno y desinteresado Amor paso por ti y siempre con mis pies descalssos y asi hija y esposa mia muestrate costante en seguir lo perfecto de mis passos pues mi braso fuerte sera en ti y peleara por ti y te sera el todo en tus nesesidades y mi Amor te convertira en dulse y suave lo amargo y molesto a la condision de la carrne

Responde el Alma

O mi enamorado Jesus O mi dulse y tierno amanteO alegria de los sielos O dulse Jesus amable

(Toda Sentildeor me derrito toda Sentildeor me desagoy quiero vivir por ti ea sentildeor abrasadme) [Tachado en el original]

Toda Sentildeor me derrito toda Sentildeor me desagoy quiero morir por vos ea Sentildeor que ya acabo

Ya tus amores me llaman ya tus perfumes me traencon suspiros y agonias Sentildeor asta que te alcanse

O mi Jesus amoroso no puedo mas dilatarmeya la pasiensia me falta dulse Jesus abrasadme

(No puedo vivir sin vos no puedo mas dilatarmeya la pasiensia me falta dulse) [Tachado en el original]

No puedo vivir sin vos mi dulse Jesus amablepues me teneis echisada siendo mi esposo y mi Padre

152 La aparicioacuten de una mayuacutescula al principio de una oracioacuten es algo totalmente arbitrario en este ma-nuscrito dada la libertad ortograacutefica de la autora Como se puede observar en la mayor parte de las veces no es el caso

176 JUAN FRANCISCO MAURA

Ay que me abraso Ay que me quemo del Amor deJesus nasareno como no tocan y tantildeen a fuego

Responde Jesus Hija mia tus simples vozes oygo y aunque resuenan bien a mis oidos pero te deseo mas mansa y pasifica en tus fervores ya sabes que no siempre as de vivir en mantillas ni a los pechos de tu Madre por que es rason que padescas con espiritu fuerte como mu-jer valerosa por que a una esposa del Rey soberano y prinsipe de la paz no le estan bien chiquerias ni fervores de nintildea malcriada y ya es ora que la destete su Madre la Naturaleza y que empesando su nueva vida camine con el favor de mi grasia sigiendo mis passos de eterna vida esto con sus pies descalssos segun mis leyes de Amor puro y desinteresado lo tienen ordenado153 y vivir en paz como lo deje en-cargado a mis apostoles Santos repitiendoles varias vezes Vivir en pas y caridad esto es un vivir en Dios y Dios en el Alma y asi hija mia el Alma que vive en paz vive en mi Como mis cortesanos en el cielo y pues me pides que te ensentildee a vivir segun las leyes de mi condision Repito el desir que te debes mostrar sufrida en todo tiempo y estado sin permitir en tu corason que ni aun los fervores se adelanten con estremos ni ademanes sino atiende y aprende de mi purisima Madre pues siempre la veras si bien lo consideras que mientras vivio en el mundo en todos sus trabajos se mostro firme fuerte costante como piedra diamante Pues mirandome nintildeo entre sus brasos desnudo en el pesebre desnudo y crusificado en los brassos de una cruz En estos y otros passos no se mudo su rostro sino que en suma serenidad y pasifico corason toda se sacrificaba enteramente en los brassos de mi Amor y rendido su corason y voluntad en la de mi eterno Padre por ejemplo te la doy y deseo que aprendas de sus nobles calidades pues te aseguro carisima que las leyes de mi condision y pura verdad todo lo allaras enserrado en el corason de mi purisima Madre sedle fiel y descansaras en paz

+

Quartillas a un alma que padese soledad interior

1Un Alma afligida y tristese ve en un campo desiertay en el su esposo la tieneAtormentada y sedienta

153 Es a traveacutes de estas liacuteneas lo que hace suponer que la autora de este diaacutelogo amoroso entre el Alma y Je-suacutes es novicia esto es laquoque estaacute empesando su nueva vidaraquo En las mismas liacuteneas una vez maacutes se hace alusioacuten al laquodesteteraquo de su vida civil laquoa una esposa del Rey soberano y principe de la paz no le estan bien chiquerias ni fervores de nintildea malcriada y ya es ora que la destete su Madre la naturalesaraquo (fol 5)

177ESPANtildeOLAS DE ULTRAMAR EN LA HISTORIA Y EN LA LITERATURA

2Pendiente se ve en el AyreSolo un hilo la sustentasin tocar el pie en el sueloporque del no tome tierra

3Mirandola esta yto a ytoaquel sol que la atraviesay la enviste con sus rayosmas ella no pestantildeea

4Como sigarra padese y como a tal se atormentabatiendo sus mismas Alasy el corason se atraviesa

5Con penas sustos temoresquando se mira assi mesmasin tener valor en nadaporque es la misma flaquesa

6Pero el Amor de su esposotoda su atension le llevay la pone en un abismopero cubierto en tiniebla

7Desea dar algun bueloy subir con ligeresapero se mira travadacon una fuerte cadena

8Clama suspira y padeseMas del todo se sujetaRindiendo su voluntadA la divina clemencia

9Los enemigos del AlmaCruelmente le asen guerray ella aunque firme y constantelos reselos la atormentan

178 JUAN FRANCISCO MAURA

10de todos modos padeseaunque gosa la asistensiadel divino esposo amadoque en su interior se recrea

11Solo de verla penary con verla tan serenadise resibe mil gustosde su sigarra pequentildea

12Le sabe el mundo a mil yelesy su trato le atormentaviendo en el mil falsedadesque todas saben a tierra

13Para poderse librardeja de correr y buelacon las Alas del Amory el mismo Amor se la lleva

Una vida dedicada a un amor divino un amor que le haraacute llenar un buen nuacutemero de cuartillas dedicadas a tan alta empresa Se desconoce si la vocacioacuten de Sor Nada con-tinuoacute con tanta intensidad el resto de sus diacuteas Ciertamente la vida en el covento no era faacutecil En algunos casos la experiencia era traumaacutetica incluso fatal para algunas de las adolescentes de la Ameacuterica Espantildeola Las reglas del claustro eran severas por varias razones Estas joacutevenes si no teniacutean el permiso de la superiora no podiacutean recibir visitas no podiacutean volver a sus casas su correspondencia era censuraba y no podiacutean salir del periacutemetro conventual Igualmente se levantaban antes del amanecer para oir misa tra-bajaban el resto del diacutea y lo maacutes interesante es que muchas veces esta vida era aceptada por muchas

Page 38: Tercera parte: Mujeres en la vida intelectual - …parnaseo.uv.es/Editorial/Maura/TerceraParte.pdf · La Biblia, por su parte, hace repetidas menciones de la mujer y sobre el comporta-

168 JUAN FRANCISCO MAURA

der la postura ideoloacutegica de esta gran mujer si tienen en cuenta ademaacutes de los factores antes mencionados otros tantos de caraacutecter biograacutefico concernientes a su educacioacuten y matrimonio

Otra escritora fue la mexicana dontildea Mariacutea Casilda Pozo natural de Temestla (Meacutexi-co) Nacida en el mes de abril de 1682 dejoacute escrita su biografiacutea en 16 cuadernos el ma-nuscrito original se encuentra en la biblioteca del colegio de San Gregorio de Meacutexico Fue su confesor el jesuiacuteta Domingo Quiroga que fue quieacuten la incitoacute a escribir su obra (Serrano y Sanz 270 137) Sor Juana de San Antonio aparece a principios del siglo XVII formando parte de un grupo de religiosas espantildeolas que fueron a Manila por la ruta de Meacutexico Ademaacutes de distinguirse por sus cualidades personales su obra interesa por ofrecer informacioacuten testimonial y costumbrista acerca de la forma de vestir de chinos y japoneses (Serrano y Sanz 270 225)

Otra monja esta vez ecuatoriana fue Gertrudis de San Ildefonso Nacida en 1652 profesoacute su vocacioacuten en el convento de Santa Cruz de Quito dejando escrita su vida por mandato de su confesor el padre Martiacuten de la Cruz el cual hizo una biografiacutea laquoen tres gruesos voluacutemenesraquo Gertrudis de San Ildefonso murioacute en 1709 (Serrano y Sanz 270 300) en olor de santidad

Sor Mariacutea Ana Agueda de San Ignacio nacioacute el 3 de marzo de 1695 en la dioacutecesis de la puebla de los Angeles en un rancho del lugar de Santiago Tecaliacute (Serrano y Sanz 270300) Esta monja mexicana escribioacute varias obras durante su vida conventual a lo largo de la cual desempentildeoacute el cargo de priora por muchos antildeos Entre sus obras todas de caraacutecter piacuteo y de laquoamor divinoraquo escribioacute un curioso y laquocopiosoraquo tratado de la Leche virginal de la Soberana Madre de Dios El padre Fr Juan de Villa Saacutenchez hace el siguiente comentario al respecto laquoen que hablando primero en sentido natural de los beneficios que debemos a Nuestra Sentildeora pasa a tratar en sentido miacutestico y alegoacuterico enten-diendo en la leche la doctrinaraquo (Serrano y Sanz 270301) Mexicana fue tambieacuten Sor Petronila de San Joseacute que ejercioacute como abadesa del Real monasterio de Jesuacutes Mariacutea de la ciudad de Meacutexico Escribioacute Vidas de varias religiosas ejemplares obra que tiene su im-portancia ya que al parecer laquoDe esta obra se sirvioacute D Carlos de Siguumlenza y Goacutengora para escribir su Parayso Occidental (Meacutexico 1684) seguacuten eacutel mismo declara en el proacutelogo diciendo lsquoa quien si hay algo bueno en esta historia se le debe todorsquoraquo (Serrano y Sanz 270 354) Menos conocida fue su compatriota Sor Luisa de Santa Catalina natural de Xacona laquopueblo situado en las inmediaciones de Zamora (Meacutexico)raquo siendo bautizada en 1682 Escribioacute Cartas espirituales a su confesor el P Juan Loacutepez de Aguado (Serrano y Sanz 270 361-62)146

Todos estos escritos la mayoriacutea de ellos ignorados por el gran puacuteblico tienen la im-portancia de darnos una perspectiva diferente En otras palabras ensentildearnos la maacutes refinada sensibilidad de muchas mujeres que permanecieron y en su mayoriacutea siguen permaneciendo a laquooscurasraquo de una eacutepoca tan rica de la literatura espantildeola como fue el Siglo de Oro Este siglo fue tambieacuten en su dimensioacuten literaria y artiacutestica patrimonio de la mujer

146 Para profundizar en muchas de estas escritoras hispano-americanas la consulta de la Biblioteca Hispano-Americana de Beristain de Souza resulta de capital importancia

169ESPANtildeOLAS DE ULTRAMAR EN LA HISTORIA Y EN LA LITERATURA

Sor Nada ardores divinos de una monja adolescente escritos ineacutedi-tos de una recieacuten profesa del siglo XVI147

iexclQueacute encantadores son tus amores hermana miacutea espo-sa iexclQueacute deliciosos son tus amores maacutes que el vino Y el aroma de tus perfumes es mejor que el de los baacutelsamos Miel virgen destilan tus labios esposa miel y leche hay en tu lengua y el perfume de tus vestidos es como aroma de incienso (Cantar de los Cantares 4 10-11)

Sor Nada llamada asiacute por humildad seguacuten dice el Indice de manuscritos de la Biblio-teca Nacional de Madrid es uno de los ejemplos maacutes desconocidos e interesantes que tenemos de la poesiacutea y prosa amoroso-religiosa del siglo XVII Hasta la fecha nunca se habiacutea publicado su obra e incluso hasta el antildeo 1995 para mi sorpresa no habiacutea copias microfilmadas de sus manuscritos en la Biblioteca Nacional Serrano y Sanz en su libro Apuntes para una Biblioteca de Escritoras Espantildeolas hace una escueta y pasajera mencioacuten de esta mujer y de su obra (68-69) siendo eso todo lo que hasta ahora se sabiacutea de ella Sus escritos consisten en los siguientes manuscritos

1 laquoEn queacute consiste un verdadero amor de Diosraquo 9 hojas uacutetiles en 4ordm letra del siglo XVII Biblioteca Nacional de Espantildea Manuscrito 1295926

2 laquoPintura del Propio Amorraquo laquoPintura del propio Amorraquo 10 hojas uacutetiles en 4ordm letra del siglo XVII Biblioteca Nacional de Espantildea Manuscrito 1295927

3 laquoEsplicacioacuten sobre en queacute consiste la paz del Almaraquo laquoQuartillas aacute un Alma que padece soledad interiorraquo 7 hojas uacutetiles en 4ordm letra del siglo XVII Biblioteca Nacio-nal de Espantildea Manuscrito 1295828

En cuanto a su persona soacutelo se nos dice que laquose encubrioacute con este seudoacutenimo laquoSor Nadaraquo Esta monja desconocida de origen hispanoamericano posee toda la frescura e ingenuidad de una joven apasionada metida por vocacioacuten u obligacioacuten a ejercer la profesioacuten maacutes comuacuten para mujeres de cierta clase social de su tiempo En sus liacuteneas podemos encontrar un misticismo simple incluso en algunos momentos infantil pero a su vez lleno de una fuerza y sensualidad interior poco comuacuten en escritos de este geacute-nero que desborda los liacutemites del laquoamor divinoraquo a traveacutes de los diaacutelogos entre el Alma y el Esposo Sor Nada consigue proyectar su amor a Dios maacutes allaacute de una experiencia romaacutentica Su experiencia es sincera y genuinamente miacutestica trascendiendo la imita-cioacuten o la propia creacioacuten poeacutetica ficcionalizada (Hatzfeld 30) Algunos pasajes son de un

147 Veacutease mi artiacuteculo Sor Nada ardores divinos de una monja adolescente escritos ineacuteditos de una monja profesa del siglo XVIIraquo Espeacuteculo Revista de estudios literarios 26 (2004) 1-10 Universidad Complutense de Madrid http wwwucmesinfoespeculonumero26sornadahtml

170 JUAN FRANCISCO MAURA

alto contenido eroacutetico con sustantivos y metaacuteforas que recuerdan la maacutes iacutentima unioacuten amorosa en unos casos y el tierno amor maternal en otros

[T]e miro Jesus mio desnudo a las inclemencias del tiempo y ardien-do en puro fuego de Amor por la salud de las Almas y me ensentildeas a que te ame con todo mi corason y puresa de espiritu No atendiendo ni buscando umanos intereses ni a solisitar consuelos ni regalos espi-rituales que suelen empantildear la puresa del noble corason No mi Jesus amable pues antes me ensentildeaste tu puro Amor que desnudo sean [sic] de encaminar mis passos desde el pesebre asta la cuna en donde te miro tan desnudo como el pesebre y todo Sentildeor por mi Amor (Mss 12959 26 hoja 1 v)

El manuscrito (12959 27) de la mencionada serie de tres contiene algunas correccio-nes quizaacute hechas por el confesor o quizaacute por ella misma cuando se dirige con excesiva familiaridad y arrebatado fervor a su Amado148 He escogido el manuscrito (12959 Caja 28) en primer lugar por ser el ejemplo maacutes representativo de su poesiacutea y prosa En este manuscrito encontramos de forma maacutes directa que alegoacuterica toda la frescura de un diaacutelogo entre Jesuacutes y el alma que raya como diriacutea Cervantes laquoa la llana y sin rodeosraquo (667 lib 2 cap 38) con el doloroso y a veces desesperado deseo de la entrega y la unioacuten final con el Amado La ortografiacutea no ha sido corregida respetaacutendose el texto ori-ginal149 Veamos el siguiente fragmento

Mira que te amo con Amor de padre y con Amor de esposo el mas fino y puro enamorado que no tan solo me presio de darte mi mano sino tambien todo mi cuerpo y sangre para que con mi pan de vida te sustentes y te regales a tus anchuras y que con mi propio espiritu vivas en paz como tu lo deseas y que mis amores sean unico alivio en tus trabajos en esta mortal vida pues si esto es asi y sabes que muero por darte vida dime esposa mia de que te fatigas Dame querida tus bras-sos y dime si me amas como yo te amo (Hoja 4)

148 La antologiacutea de Promis ha procurado insertar entre los textos antoloacutegicos algunos que se refieren a la es-critura de mujeres fundamentalmente de aquellos generados en el interior de los espacios conventuales Estos textos se fundan como laquohistorias de vidasraquo y responden casi siempre a los requerimientos de los confesores de las monjas coloniales En este sentido resulta valiosiacutesima la incorporacioacuten de la llamada Relacioacuten autobiograacute-fica de Sor Ursula Suaacuterez como una muestra significativa de la escritura monjil entendida en esta eacutepoca (como tambieacuten en la tradicioacuten europea medieval) inserta en las denominadas laquolabores de manoraquo de las religiosas ya que el texto escrito por mandato se convertiacutea en una suerte de entramado o tejido linguumliacutestico es decir en un nuevo bordado que la mayor parte de las veces el confesor convertido en censor iba haciendo tachando y enmendando En la antologiacutea Promis agrega un texto de Sor Tadea Garciacutea de la Huerta titulado Relacioacuten de la inundacioacuten que hizo el riacuteo Mapocho de la ciudad de Santiago de Chile en el monasterio de Carmelitas titular de San Rafael el diacutea 16 de junio de 1783 se trata de un poema tipo romance escrito en versos octosilaacutebicos y que da cuenta de lo sucedido ese diacutea en el convento (Resentildea de la literatura del reino de Chile de Joseacute Promis Eddie Morales Pintildea httpwwwupaclpublicaciones2002literatura_promishtm)

149 Son frecuentes las faltas ortograacuteficas Una de ellas es el uso constante del seseo La ausencia de acentua-cioacuten y puntuacioacuten exceptuando alguacuten punto o coma arbitrario no seguido casi nunca de mayuacutescula inicial lo mismo que el uso igualmente aribitrario de la h o de b v r q g j m n x etc No olvidemos de la misma forma la laxitud linguumliacutestica existente en el siglo XVII (no sabemos a queacute parte de eacuteste pertenece el manuscrito) asiacute como la joven edad de la monja

171ESPANtildeOLAS DE ULTRAMAR EN LA HISTORIA Y EN LA LITERATURA

Los versos del presente manuscrito poseen la misma fuerza que tiene su prosa Con una estructura estroacutefica indefinida estaacuten aparentemente corregidos por alguien que tu-vo la oportunidad de conocer personalmente a la autora Muy probablemente se trate del padre al que hace referencia al principio del primer manuscrito laquoMandame el Pd que le declare en que consiste un verdadero amor a Diosraquo a continuacioacuten continuacutea con su caracteriacutestica humildad laquo[O]bedesere y dire lo q Dios me inspire segun mi rudesa y simplisidadraquo (Mss 12959 26) En cuanto a la fuerza pasional de esta joven observamos con cierta tristeza coacutemo aparece sublimada en sus escritos con toda la enegiacutea de una joven mujer llena de intensidad y vida pero encerrada en los liacutemites de un convento Veamos un ejemplo en donde responde el Alma en los siguientes versos

O mi enamorado Jesus O mi dulse y tierno amanteO alegria de los sielos O dulse Jesus amable

(Toda Sentildeor me derrito toda Sentildeor me desagoy quiero vivir por ti ea sentildeor abrasadme) [Tachado en el original]

Toda Sentildeor me derrito toda Sentildeor me desagoy quiero morir por vos ea Sentildeor que ya acabo

Ya tus amores me llaman ya tus perfumes me traencon suspiros y agonias Sentildeor hasta que te alcanse

O mi Jesus amoroso no puedo mas dilatarmeya la pasiensia me falta dulse Jesus abrasadme

(No puedo vivir sin vos no puedo mas dilatarmeya la pasiensia me falta dulse) [Tachado en el original]

No puedo vivir sin vos mi dulse Jesus amablepues me teneis echisada siendo mi esposo y mi Padre

Ay que me abraso Ay que me quemo del Amor deJesus nasareno como no tocan y tantildeen a fuego150

Estos versos llenos de arrebato sublimado conectan con toda la tradicioacuten miacutestica es-pantildeola que se remonta a Ramoacuten Llul y que culmina en el maacutes universal de nuestros

150 En toda la fuerza y simbologiacutea del amor maacutes iacutentimo del maacutes alto y sublime placer de la unioacuten de los amantes tal como lo encontramos en el Cantar de los Cantares y en San Juan de la Cruz Leemos en la Biblia

Ya me he quitado la tuacutenica iquestCoacutemo volver a vestirme Ya me he lavado los pies iquestCoacutemo volver a ensuciarlosMi amado metioacute su mano por el agujero (de la llave) y mis entrantildeas se estremecieron por eacutel Me levanteacute para abrir a mi amado Mis manos destilaron mirra y mis dedos mirra exquisita en el pestillo de la cerradura (5 3-5)

Nos ocurre lo mismo con San Juan de la Cruz en su insuperable poema laquoLlama de amor vivaraquo

iexclOh cauterio suaveiexclOh regalada llagaiexclOh mano blanda iexclOh toque delicadoque a vida eterna sabey toda deuda pagaMatando muerte en vida la has trocado

172 JUAN FRANCISCO MAURA

miacutesticos San Juan de la Cruz Esta tradicioacuten se extiende hasta finales del siglo XVII esto es hasta los finales del Barroco siendo un poco maacutes tardiacuteo en la Ameacuterica espantildeola Sin tener como propoacutesito discutir en el presente trabajo a queacute corriente miacutestica pertenece la obra de Sor Nada es necesario resaltar no obstante el hecho de que estaacute escrito por una mujer y ademaacutes de tierna edad El manuscrito 12959 Caja 26 termina con estas pa-labras laquo[T]odas estas boverias escrivi por entretenimiento siendo resien profesa en la religion Sor Nadaraquo Mas no por la juventud de su autora los escritos dejan de tener lo-gradas metaacuteforas imaacutegenes y siacutembolos sacados de la naturaleza La alegoriacutea de la unioacuten matrimonial poseeacute el fuego liacuterico de la maacutes apasionada de las relaciones amorosas vivi-ficada por perfumes flores insectos animales escarchas nieves o abrojos Por lo tanto aunque la narracioacuten destile cierta ingenuidad no carece por ello de un vocabulario rico con el sabor popular de la poesiacutea de los cancioneros y romances de tradicioacuten renacen-tista No ha sido otra mi intencioacuten que la de rescatar del olvido unos escritos en prosa y en verso llenos de frescura y espontaneidad que nos muestran la pasioacuten con que la joven novicia se laquoentrega en cuerpo y almaraquo a los menesteres de su profesioacuten guiada por un padre espiritual en esos primeros antildeos de formacioacuten Esta ha sido la razoacuten por la que presento a continuacioacuten el citado manuscrito en su totalidad

Sor Nada (Mss 1295928)

laquoEsplicacion sobre en que consiste la paz del AlmaraquolaquoQuartillas a un Alma que padece soledad interiorraquo

[7 hojas utiles en 4ordm letra del siglo XVII]

+

Esplicacion sobre en que consiste la paz del Alma

Pareseme segun mi rudo entender que la verdadera paz del Alma con-siste en una muy pura y buena consiencia en un corason liso y bien intensionado en una verdadera rectitud de espiritu en el qual el Alma procura bolar a Dios sin jamas detenerse a respetos umanos ni reparar en que me diran ni de que me censuraran sino me apresuro a seguir a unos entenderes y pareseres dorados en los quales pretende el mundo engantildear y ensuciar si se puede la puresa de un corason unicamente de Dios y de su Santa ley y se lo conserva cristalino con la divina asis-tencia de la gracia y comprendido de su Amor y temor siguiendo la luz divina de tan amante Sentildeor Dios y ombre verdadero con que este ilustrado corason ni se altera ni se mueve por los disfrasses dorados que ase el mundo y sus moradores mayormente con falssas amistades aunque con ellos muestre buena intension Con la misma grasia y luz de Dios conose el buen corason estos disfrasses que le ase el mundo y se retira de todo con espiritu y valor esto sin la menor alterasion sino que en suma paz se retira a buscar a Dios dentro de su mismo corason

173ESPANtildeOLAS DE ULTRAMAR EN LA HISTORIA Y EN LA LITERATURA

y se abrasa con su pura verdad en la qual se le descubren mil interio-res secretos tan solidos puros y verdaderos que la misma Alma queda abismada y de puro grandes no los puede bien comprender ni esplicar pero estos mismos secretos divinos le sirven de espuelas para no solo correr sino bolar con pies de plumas en seguimiento de su bien ama-do Jesus y como este soberano Sentildeor es tan amante de sus espossas las Almas luego que la ve bolar con pies de plumas la sale al encuen-tro en despoblado campo que se deve de llamar Campo de Amor de Dios y el mismo Sentildeor se viene a las manos por ser Dios que nos ama con Amor infinito de Padre benigno y amoroso con que asiendose en contra deso este divino enamorado en lo interyor de el Alma que le busca con ansias de servirle y amarle y en aquella soledad traban una conversasion amorosa y sensilla como la pluma simple de quien esto escrive

Divino enquentroDios y el Alma en la soledad

O Soberano Principe de la paz dise el Alma tus perfumes me traen a ti bolando porque alla en el mundo y sus valedores me pretendian engantildear y entretenerme con pegaminossas amistades que facilmen-te me pudieran envenenar y matarme apartandome de ti Mi dulse Jesus amable mi Redentor Soberano que con tantas ansias me sales al enquentro como siervo [ciervo] erido de mis Amores los quales tu Amor me ofrese para que con tu mismo Amor te ame y te sirva en paz sin perturbarme ni contristarme ni cansarme de padeser pasando si se ofrese por escarchas nieves espinas ni abrojos ni por otros diverssos trabajos ni piedras de contradision que tu me puedes permitir pues por mas que el mar se levante con sus ferosses olas contra mi ni piedras se me tiren al rostro en todo Sentildeor me quieres con serenidad pasifica sin la menor perturbasion Todo Sentildeor quieres que lo tome con Serenidad de espiritu y asi vengo a ti bolando para que mejor me ensentildees a vivir segun las leyes de tu noble condision que me son muy agradables por mas que el mundo me las despresie por segir sus vanidades y torsidas intensiones con apariensias de bien y con este engantildeo y bien me quie-ro mas a mi que no a mi proximo veo que segun mi pareser se pierden muchas Almas y tambien de aquellos que se depresian y pasan por muy espirituales Con que me paresen pocos los que llegan a padeser con desnudes151 de espiritu por tu purisimo Amor y me parese essas se quedan muy atrasadas en la virtud por el peligro de bolver muy atras el paso de modo que se pueden despentildear y pereser en su misma desgra-sia ya por soberbia o por otras enfermedades que se les pega al corason y asi lo pasan como siegos ignorantes sin advertir en sus peligros

151 La letra en cursiva es miacutea

174 JUAN FRANCISCO MAURA

este aquerdo Sentildeor y otros que tu verdad me ensentildea me ase venir uyendo de las paredes del mundo y me vengo a ti Dios mio bolando con las dos Alas del Amor y temor que tu mismo Amor me ofrese tan de gracia y tan de grado que no se duentildeo mio con que lo responder a tan soberano beneficio y finesa de tus entrantildeas de Amorvengo Sentildeor y esposo mio unicamente a descansar en ti pues los peli-gros del camino me an puesto en mucho sobresalto temiendo el per-derte y sin ti perderme para siempre por una eternidad sin fin pues deseo amado mio ganarme ganandote a ti y vivir en ti aora en vida y despues eternamente y estos cuidados me traen fatigada molida y cansada y no podre tener alivio y descanso sino viendome entre tus brassos aunque sea estando en cruz pues ese es el fin de mis deseos vivir y morir en ti ablame mi cordero manso y ensentildeame a que ver-daderamente te ame como fiel esposa ea mi caro amigo dame la ma-no pues sabes Amor mio que en mi no ay mano sin tu misma mano y asi mi Dios y Sentildeor mi Principe Soberano con umilde rendimiento y deseos de alcansarte te suplico me des la mano y me consueles en estos mis trabajos Deseo Sentildeor vivir en paz y los malos amores de mi Naturaleza flaca no me dejan detentar y no quieren por mi desgrasia atropellar con las leyes de tu Amor ni quisiera perturbar mi corason quando me veo con un torvellino de olas y contratiempos que a menu-do me suelen sercar pero si tu Sentildeor me das la mano nada temo sino que me aseguro y vivire en paz sin que me fatiguen los contratiempos pues mi mano en la tuya y mi espiritu en el tuyo por mas borrascas que me envistan no seran bastantes para rendir mi voluntad a la suya bien si para pronunsiar un fiat que resuene bien atras en tus oidos y que en medio de mis fatigas me ponga a cantar tus divinas misericor-dias hea Sentildeor ya pretendo serrar mis labios por no desir mas bove-rias y deseo Sentildeor oir tus palabras de vida eterna abla Sentildeor que tu sierva oye con atension y cuydado mira mi Dios que se me ase tarde y espero con prisa deseando saborearme y aprovecharme de los ecos de tu Santa dotrina pues todas tus palabras saben a eterna vida callen pues mis sentidos y potensias y todo se ponga en paz pues mi dulse y soberano Sentildeor no se escusara de ablar me aun que en mudo silensio hea mi gran Prinsipe de la paz ablame que tus puros amores me traen perdida por estos asperos montes y mis cortos pasos no te pueden dar alcanse mirame mi Dios a tus pies postrada como un vil gusano y me-nor ormiga de la tierraabla Jesus y dise a su esposa el Alma querida esposa mia que me pides y por que te muestras tan fatigada y mal sufrida no vives como corde-rita del campo buscando de mis pechos el sustancial pasto mi Amor no te sustenta y mi grasia te promete eterna vida pues dime amada de que te fatigas y te muestras mal sufrida mira que te amo con Amor de padre y con Amor de esposo el mas fino y puro enamorado que no tan solo me presio de darte mi mano sino tambien todo mi cuerpo y

175ESPANtildeOLAS DE ULTRAMAR EN LA HISTORIA Y EN LA LITERATURA

sangre para que con mi pan de vida te sustentes y te regales a tus an-churas y que con mi propio espiritu vivas en paz como tu lo deseas y que mis amores sean unico alivio en tus trabajos en esta mortal vida pues si esto es asi y sabes que muero por darte vida dime esposa mia de que te fatigas Dame querida tus brassos y dime si me amas como yo te amoResponde el Alma152 Tu mi Dios sabes si yo te amo pues de mi solo se que mis deseos y ansias buelan a ti mas no alcanso a saber si te amo como tu de-seas ser amado y como desconfio tanto de mi y de mis prosederes falssos temo Dios mio perderme y perderte y asi Sentildeor pues no desechas mis Amores y te muestras tan fino en amarme te pido me ensentildees a vivir segun las leyes de tu pura verdad y fina condisionhija mia dise Dios la prueva de un verdadero Amor consiste en sufrir callar y padeser por mi unico Amor y en todo seguir mis pasos sin ja-mas retroseder por mas fragoso que se muestre el camino pues nunca seran tantas las espinas las escarchas ni las nieves ni los vientos bo-rrascosos que te se ofrescan pasar por mi Amor como los que mi tierno y desinteresado Amor paso por ti y siempre con mis pies descalssos y asi hija y esposa mia muestrate costante en seguir lo perfecto de mis passos pues mi braso fuerte sera en ti y peleara por ti y te sera el todo en tus nesesidades y mi Amor te convertira en dulse y suave lo amargo y molesto a la condision de la carrne

Responde el Alma

O mi enamorado Jesus O mi dulse y tierno amanteO alegria de los sielos O dulse Jesus amable

(Toda Sentildeor me derrito toda Sentildeor me desagoy quiero vivir por ti ea sentildeor abrasadme) [Tachado en el original]

Toda Sentildeor me derrito toda Sentildeor me desagoy quiero morir por vos ea Sentildeor que ya acabo

Ya tus amores me llaman ya tus perfumes me traencon suspiros y agonias Sentildeor asta que te alcanse

O mi Jesus amoroso no puedo mas dilatarmeya la pasiensia me falta dulse Jesus abrasadme

(No puedo vivir sin vos no puedo mas dilatarmeya la pasiensia me falta dulse) [Tachado en el original]

No puedo vivir sin vos mi dulse Jesus amablepues me teneis echisada siendo mi esposo y mi Padre

152 La aparicioacuten de una mayuacutescula al principio de una oracioacuten es algo totalmente arbitrario en este ma-nuscrito dada la libertad ortograacutefica de la autora Como se puede observar en la mayor parte de las veces no es el caso

176 JUAN FRANCISCO MAURA

Ay que me abraso Ay que me quemo del Amor deJesus nasareno como no tocan y tantildeen a fuego

Responde Jesus Hija mia tus simples vozes oygo y aunque resuenan bien a mis oidos pero te deseo mas mansa y pasifica en tus fervores ya sabes que no siempre as de vivir en mantillas ni a los pechos de tu Madre por que es rason que padescas con espiritu fuerte como mu-jer valerosa por que a una esposa del Rey soberano y prinsipe de la paz no le estan bien chiquerias ni fervores de nintildea malcriada y ya es ora que la destete su Madre la Naturaleza y que empesando su nueva vida camine con el favor de mi grasia sigiendo mis passos de eterna vida esto con sus pies descalssos segun mis leyes de Amor puro y desinteresado lo tienen ordenado153 y vivir en paz como lo deje en-cargado a mis apostoles Santos repitiendoles varias vezes Vivir en pas y caridad esto es un vivir en Dios y Dios en el Alma y asi hija mia el Alma que vive en paz vive en mi Como mis cortesanos en el cielo y pues me pides que te ensentildee a vivir segun las leyes de mi condision Repito el desir que te debes mostrar sufrida en todo tiempo y estado sin permitir en tu corason que ni aun los fervores se adelanten con estremos ni ademanes sino atiende y aprende de mi purisima Madre pues siempre la veras si bien lo consideras que mientras vivio en el mundo en todos sus trabajos se mostro firme fuerte costante como piedra diamante Pues mirandome nintildeo entre sus brasos desnudo en el pesebre desnudo y crusificado en los brassos de una cruz En estos y otros passos no se mudo su rostro sino que en suma serenidad y pasifico corason toda se sacrificaba enteramente en los brassos de mi Amor y rendido su corason y voluntad en la de mi eterno Padre por ejemplo te la doy y deseo que aprendas de sus nobles calidades pues te aseguro carisima que las leyes de mi condision y pura verdad todo lo allaras enserrado en el corason de mi purisima Madre sedle fiel y descansaras en paz

+

Quartillas a un alma que padese soledad interior

1Un Alma afligida y tristese ve en un campo desiertay en el su esposo la tieneAtormentada y sedienta

153 Es a traveacutes de estas liacuteneas lo que hace suponer que la autora de este diaacutelogo amoroso entre el Alma y Je-suacutes es novicia esto es laquoque estaacute empesando su nueva vidaraquo En las mismas liacuteneas una vez maacutes se hace alusioacuten al laquodesteteraquo de su vida civil laquoa una esposa del Rey soberano y principe de la paz no le estan bien chiquerias ni fervores de nintildea malcriada y ya es ora que la destete su Madre la naturalesaraquo (fol 5)

177ESPANtildeOLAS DE ULTRAMAR EN LA HISTORIA Y EN LA LITERATURA

2Pendiente se ve en el AyreSolo un hilo la sustentasin tocar el pie en el sueloporque del no tome tierra

3Mirandola esta yto a ytoaquel sol que la atraviesay la enviste con sus rayosmas ella no pestantildeea

4Como sigarra padese y como a tal se atormentabatiendo sus mismas Alasy el corason se atraviesa

5Con penas sustos temoresquando se mira assi mesmasin tener valor en nadaporque es la misma flaquesa

6Pero el Amor de su esposotoda su atension le llevay la pone en un abismopero cubierto en tiniebla

7Desea dar algun bueloy subir con ligeresapero se mira travadacon una fuerte cadena

8Clama suspira y padeseMas del todo se sujetaRindiendo su voluntadA la divina clemencia

9Los enemigos del AlmaCruelmente le asen guerray ella aunque firme y constantelos reselos la atormentan

178 JUAN FRANCISCO MAURA

10de todos modos padeseaunque gosa la asistensiadel divino esposo amadoque en su interior se recrea

11Solo de verla penary con verla tan serenadise resibe mil gustosde su sigarra pequentildea

12Le sabe el mundo a mil yelesy su trato le atormentaviendo en el mil falsedadesque todas saben a tierra

13Para poderse librardeja de correr y buelacon las Alas del Amory el mismo Amor se la lleva

Una vida dedicada a un amor divino un amor que le haraacute llenar un buen nuacutemero de cuartillas dedicadas a tan alta empresa Se desconoce si la vocacioacuten de Sor Nada con-tinuoacute con tanta intensidad el resto de sus diacuteas Ciertamente la vida en el covento no era faacutecil En algunos casos la experiencia era traumaacutetica incluso fatal para algunas de las adolescentes de la Ameacuterica Espantildeola Las reglas del claustro eran severas por varias razones Estas joacutevenes si no teniacutean el permiso de la superiora no podiacutean recibir visitas no podiacutean volver a sus casas su correspondencia era censuraba y no podiacutean salir del periacutemetro conventual Igualmente se levantaban antes del amanecer para oir misa tra-bajaban el resto del diacutea y lo maacutes interesante es que muchas veces esta vida era aceptada por muchas

Page 39: Tercera parte: Mujeres en la vida intelectual - …parnaseo.uv.es/Editorial/Maura/TerceraParte.pdf · La Biblia, por su parte, hace repetidas menciones de la mujer y sobre el comporta-

169ESPANtildeOLAS DE ULTRAMAR EN LA HISTORIA Y EN LA LITERATURA

Sor Nada ardores divinos de una monja adolescente escritos ineacutedi-tos de una recieacuten profesa del siglo XVI147

iexclQueacute encantadores son tus amores hermana miacutea espo-sa iexclQueacute deliciosos son tus amores maacutes que el vino Y el aroma de tus perfumes es mejor que el de los baacutelsamos Miel virgen destilan tus labios esposa miel y leche hay en tu lengua y el perfume de tus vestidos es como aroma de incienso (Cantar de los Cantares 4 10-11)

Sor Nada llamada asiacute por humildad seguacuten dice el Indice de manuscritos de la Biblio-teca Nacional de Madrid es uno de los ejemplos maacutes desconocidos e interesantes que tenemos de la poesiacutea y prosa amoroso-religiosa del siglo XVII Hasta la fecha nunca se habiacutea publicado su obra e incluso hasta el antildeo 1995 para mi sorpresa no habiacutea copias microfilmadas de sus manuscritos en la Biblioteca Nacional Serrano y Sanz en su libro Apuntes para una Biblioteca de Escritoras Espantildeolas hace una escueta y pasajera mencioacuten de esta mujer y de su obra (68-69) siendo eso todo lo que hasta ahora se sabiacutea de ella Sus escritos consisten en los siguientes manuscritos

1 laquoEn queacute consiste un verdadero amor de Diosraquo 9 hojas uacutetiles en 4ordm letra del siglo XVII Biblioteca Nacional de Espantildea Manuscrito 1295926

2 laquoPintura del Propio Amorraquo laquoPintura del propio Amorraquo 10 hojas uacutetiles en 4ordm letra del siglo XVII Biblioteca Nacional de Espantildea Manuscrito 1295927

3 laquoEsplicacioacuten sobre en queacute consiste la paz del Almaraquo laquoQuartillas aacute un Alma que padece soledad interiorraquo 7 hojas uacutetiles en 4ordm letra del siglo XVII Biblioteca Nacio-nal de Espantildea Manuscrito 1295828

En cuanto a su persona soacutelo se nos dice que laquose encubrioacute con este seudoacutenimo laquoSor Nadaraquo Esta monja desconocida de origen hispanoamericano posee toda la frescura e ingenuidad de una joven apasionada metida por vocacioacuten u obligacioacuten a ejercer la profesioacuten maacutes comuacuten para mujeres de cierta clase social de su tiempo En sus liacuteneas podemos encontrar un misticismo simple incluso en algunos momentos infantil pero a su vez lleno de una fuerza y sensualidad interior poco comuacuten en escritos de este geacute-nero que desborda los liacutemites del laquoamor divinoraquo a traveacutes de los diaacutelogos entre el Alma y el Esposo Sor Nada consigue proyectar su amor a Dios maacutes allaacute de una experiencia romaacutentica Su experiencia es sincera y genuinamente miacutestica trascendiendo la imita-cioacuten o la propia creacioacuten poeacutetica ficcionalizada (Hatzfeld 30) Algunos pasajes son de un

147 Veacutease mi artiacuteculo Sor Nada ardores divinos de una monja adolescente escritos ineacuteditos de una monja profesa del siglo XVIIraquo Espeacuteculo Revista de estudios literarios 26 (2004) 1-10 Universidad Complutense de Madrid http wwwucmesinfoespeculonumero26sornadahtml

170 JUAN FRANCISCO MAURA

alto contenido eroacutetico con sustantivos y metaacuteforas que recuerdan la maacutes iacutentima unioacuten amorosa en unos casos y el tierno amor maternal en otros

[T]e miro Jesus mio desnudo a las inclemencias del tiempo y ardien-do en puro fuego de Amor por la salud de las Almas y me ensentildeas a que te ame con todo mi corason y puresa de espiritu No atendiendo ni buscando umanos intereses ni a solisitar consuelos ni regalos espi-rituales que suelen empantildear la puresa del noble corason No mi Jesus amable pues antes me ensentildeaste tu puro Amor que desnudo sean [sic] de encaminar mis passos desde el pesebre asta la cuna en donde te miro tan desnudo como el pesebre y todo Sentildeor por mi Amor (Mss 12959 26 hoja 1 v)

El manuscrito (12959 27) de la mencionada serie de tres contiene algunas correccio-nes quizaacute hechas por el confesor o quizaacute por ella misma cuando se dirige con excesiva familiaridad y arrebatado fervor a su Amado148 He escogido el manuscrito (12959 Caja 28) en primer lugar por ser el ejemplo maacutes representativo de su poesiacutea y prosa En este manuscrito encontramos de forma maacutes directa que alegoacuterica toda la frescura de un diaacutelogo entre Jesuacutes y el alma que raya como diriacutea Cervantes laquoa la llana y sin rodeosraquo (667 lib 2 cap 38) con el doloroso y a veces desesperado deseo de la entrega y la unioacuten final con el Amado La ortografiacutea no ha sido corregida respetaacutendose el texto ori-ginal149 Veamos el siguiente fragmento

Mira que te amo con Amor de padre y con Amor de esposo el mas fino y puro enamorado que no tan solo me presio de darte mi mano sino tambien todo mi cuerpo y sangre para que con mi pan de vida te sustentes y te regales a tus anchuras y que con mi propio espiritu vivas en paz como tu lo deseas y que mis amores sean unico alivio en tus trabajos en esta mortal vida pues si esto es asi y sabes que muero por darte vida dime esposa mia de que te fatigas Dame querida tus bras-sos y dime si me amas como yo te amo (Hoja 4)

148 La antologiacutea de Promis ha procurado insertar entre los textos antoloacutegicos algunos que se refieren a la es-critura de mujeres fundamentalmente de aquellos generados en el interior de los espacios conventuales Estos textos se fundan como laquohistorias de vidasraquo y responden casi siempre a los requerimientos de los confesores de las monjas coloniales En este sentido resulta valiosiacutesima la incorporacioacuten de la llamada Relacioacuten autobiograacute-fica de Sor Ursula Suaacuterez como una muestra significativa de la escritura monjil entendida en esta eacutepoca (como tambieacuten en la tradicioacuten europea medieval) inserta en las denominadas laquolabores de manoraquo de las religiosas ya que el texto escrito por mandato se convertiacutea en una suerte de entramado o tejido linguumliacutestico es decir en un nuevo bordado que la mayor parte de las veces el confesor convertido en censor iba haciendo tachando y enmendando En la antologiacutea Promis agrega un texto de Sor Tadea Garciacutea de la Huerta titulado Relacioacuten de la inundacioacuten que hizo el riacuteo Mapocho de la ciudad de Santiago de Chile en el monasterio de Carmelitas titular de San Rafael el diacutea 16 de junio de 1783 se trata de un poema tipo romance escrito en versos octosilaacutebicos y que da cuenta de lo sucedido ese diacutea en el convento (Resentildea de la literatura del reino de Chile de Joseacute Promis Eddie Morales Pintildea httpwwwupaclpublicaciones2002literatura_promishtm)

149 Son frecuentes las faltas ortograacuteficas Una de ellas es el uso constante del seseo La ausencia de acentua-cioacuten y puntuacioacuten exceptuando alguacuten punto o coma arbitrario no seguido casi nunca de mayuacutescula inicial lo mismo que el uso igualmente aribitrario de la h o de b v r q g j m n x etc No olvidemos de la misma forma la laxitud linguumliacutestica existente en el siglo XVII (no sabemos a queacute parte de eacuteste pertenece el manuscrito) asiacute como la joven edad de la monja

171ESPANtildeOLAS DE ULTRAMAR EN LA HISTORIA Y EN LA LITERATURA

Los versos del presente manuscrito poseen la misma fuerza que tiene su prosa Con una estructura estroacutefica indefinida estaacuten aparentemente corregidos por alguien que tu-vo la oportunidad de conocer personalmente a la autora Muy probablemente se trate del padre al que hace referencia al principio del primer manuscrito laquoMandame el Pd que le declare en que consiste un verdadero amor a Diosraquo a continuacioacuten continuacutea con su caracteriacutestica humildad laquo[O]bedesere y dire lo q Dios me inspire segun mi rudesa y simplisidadraquo (Mss 12959 26) En cuanto a la fuerza pasional de esta joven observamos con cierta tristeza coacutemo aparece sublimada en sus escritos con toda la enegiacutea de una joven mujer llena de intensidad y vida pero encerrada en los liacutemites de un convento Veamos un ejemplo en donde responde el Alma en los siguientes versos

O mi enamorado Jesus O mi dulse y tierno amanteO alegria de los sielos O dulse Jesus amable

(Toda Sentildeor me derrito toda Sentildeor me desagoy quiero vivir por ti ea sentildeor abrasadme) [Tachado en el original]

Toda Sentildeor me derrito toda Sentildeor me desagoy quiero morir por vos ea Sentildeor que ya acabo

Ya tus amores me llaman ya tus perfumes me traencon suspiros y agonias Sentildeor hasta que te alcanse

O mi Jesus amoroso no puedo mas dilatarmeya la pasiensia me falta dulse Jesus abrasadme

(No puedo vivir sin vos no puedo mas dilatarmeya la pasiensia me falta dulse) [Tachado en el original]

No puedo vivir sin vos mi dulse Jesus amablepues me teneis echisada siendo mi esposo y mi Padre

Ay que me abraso Ay que me quemo del Amor deJesus nasareno como no tocan y tantildeen a fuego150

Estos versos llenos de arrebato sublimado conectan con toda la tradicioacuten miacutestica es-pantildeola que se remonta a Ramoacuten Llul y que culmina en el maacutes universal de nuestros

150 En toda la fuerza y simbologiacutea del amor maacutes iacutentimo del maacutes alto y sublime placer de la unioacuten de los amantes tal como lo encontramos en el Cantar de los Cantares y en San Juan de la Cruz Leemos en la Biblia

Ya me he quitado la tuacutenica iquestCoacutemo volver a vestirme Ya me he lavado los pies iquestCoacutemo volver a ensuciarlosMi amado metioacute su mano por el agujero (de la llave) y mis entrantildeas se estremecieron por eacutel Me levanteacute para abrir a mi amado Mis manos destilaron mirra y mis dedos mirra exquisita en el pestillo de la cerradura (5 3-5)

Nos ocurre lo mismo con San Juan de la Cruz en su insuperable poema laquoLlama de amor vivaraquo

iexclOh cauterio suaveiexclOh regalada llagaiexclOh mano blanda iexclOh toque delicadoque a vida eterna sabey toda deuda pagaMatando muerte en vida la has trocado

172 JUAN FRANCISCO MAURA

miacutesticos San Juan de la Cruz Esta tradicioacuten se extiende hasta finales del siglo XVII esto es hasta los finales del Barroco siendo un poco maacutes tardiacuteo en la Ameacuterica espantildeola Sin tener como propoacutesito discutir en el presente trabajo a queacute corriente miacutestica pertenece la obra de Sor Nada es necesario resaltar no obstante el hecho de que estaacute escrito por una mujer y ademaacutes de tierna edad El manuscrito 12959 Caja 26 termina con estas pa-labras laquo[T]odas estas boverias escrivi por entretenimiento siendo resien profesa en la religion Sor Nadaraquo Mas no por la juventud de su autora los escritos dejan de tener lo-gradas metaacuteforas imaacutegenes y siacutembolos sacados de la naturaleza La alegoriacutea de la unioacuten matrimonial poseeacute el fuego liacuterico de la maacutes apasionada de las relaciones amorosas vivi-ficada por perfumes flores insectos animales escarchas nieves o abrojos Por lo tanto aunque la narracioacuten destile cierta ingenuidad no carece por ello de un vocabulario rico con el sabor popular de la poesiacutea de los cancioneros y romances de tradicioacuten renacen-tista No ha sido otra mi intencioacuten que la de rescatar del olvido unos escritos en prosa y en verso llenos de frescura y espontaneidad que nos muestran la pasioacuten con que la joven novicia se laquoentrega en cuerpo y almaraquo a los menesteres de su profesioacuten guiada por un padre espiritual en esos primeros antildeos de formacioacuten Esta ha sido la razoacuten por la que presento a continuacioacuten el citado manuscrito en su totalidad

Sor Nada (Mss 1295928)

laquoEsplicacion sobre en que consiste la paz del AlmaraquolaquoQuartillas a un Alma que padece soledad interiorraquo

[7 hojas utiles en 4ordm letra del siglo XVII]

+

Esplicacion sobre en que consiste la paz del Alma

Pareseme segun mi rudo entender que la verdadera paz del Alma con-siste en una muy pura y buena consiencia en un corason liso y bien intensionado en una verdadera rectitud de espiritu en el qual el Alma procura bolar a Dios sin jamas detenerse a respetos umanos ni reparar en que me diran ni de que me censuraran sino me apresuro a seguir a unos entenderes y pareseres dorados en los quales pretende el mundo engantildear y ensuciar si se puede la puresa de un corason unicamente de Dios y de su Santa ley y se lo conserva cristalino con la divina asis-tencia de la gracia y comprendido de su Amor y temor siguiendo la luz divina de tan amante Sentildeor Dios y ombre verdadero con que este ilustrado corason ni se altera ni se mueve por los disfrasses dorados que ase el mundo y sus moradores mayormente con falssas amistades aunque con ellos muestre buena intension Con la misma grasia y luz de Dios conose el buen corason estos disfrasses que le ase el mundo y se retira de todo con espiritu y valor esto sin la menor alterasion sino que en suma paz se retira a buscar a Dios dentro de su mismo corason

173ESPANtildeOLAS DE ULTRAMAR EN LA HISTORIA Y EN LA LITERATURA

y se abrasa con su pura verdad en la qual se le descubren mil interio-res secretos tan solidos puros y verdaderos que la misma Alma queda abismada y de puro grandes no los puede bien comprender ni esplicar pero estos mismos secretos divinos le sirven de espuelas para no solo correr sino bolar con pies de plumas en seguimiento de su bien ama-do Jesus y como este soberano Sentildeor es tan amante de sus espossas las Almas luego que la ve bolar con pies de plumas la sale al encuen-tro en despoblado campo que se deve de llamar Campo de Amor de Dios y el mismo Sentildeor se viene a las manos por ser Dios que nos ama con Amor infinito de Padre benigno y amoroso con que asiendose en contra deso este divino enamorado en lo interyor de el Alma que le busca con ansias de servirle y amarle y en aquella soledad traban una conversasion amorosa y sensilla como la pluma simple de quien esto escrive

Divino enquentroDios y el Alma en la soledad

O Soberano Principe de la paz dise el Alma tus perfumes me traen a ti bolando porque alla en el mundo y sus valedores me pretendian engantildear y entretenerme con pegaminossas amistades que facilmen-te me pudieran envenenar y matarme apartandome de ti Mi dulse Jesus amable mi Redentor Soberano que con tantas ansias me sales al enquentro como siervo [ciervo] erido de mis Amores los quales tu Amor me ofrese para que con tu mismo Amor te ame y te sirva en paz sin perturbarme ni contristarme ni cansarme de padeser pasando si se ofrese por escarchas nieves espinas ni abrojos ni por otros diverssos trabajos ni piedras de contradision que tu me puedes permitir pues por mas que el mar se levante con sus ferosses olas contra mi ni piedras se me tiren al rostro en todo Sentildeor me quieres con serenidad pasifica sin la menor perturbasion Todo Sentildeor quieres que lo tome con Serenidad de espiritu y asi vengo a ti bolando para que mejor me ensentildees a vivir segun las leyes de tu noble condision que me son muy agradables por mas que el mundo me las despresie por segir sus vanidades y torsidas intensiones con apariensias de bien y con este engantildeo y bien me quie-ro mas a mi que no a mi proximo veo que segun mi pareser se pierden muchas Almas y tambien de aquellos que se depresian y pasan por muy espirituales Con que me paresen pocos los que llegan a padeser con desnudes151 de espiritu por tu purisimo Amor y me parese essas se quedan muy atrasadas en la virtud por el peligro de bolver muy atras el paso de modo que se pueden despentildear y pereser en su misma desgra-sia ya por soberbia o por otras enfermedades que se les pega al corason y asi lo pasan como siegos ignorantes sin advertir en sus peligros

151 La letra en cursiva es miacutea

174 JUAN FRANCISCO MAURA

este aquerdo Sentildeor y otros que tu verdad me ensentildea me ase venir uyendo de las paredes del mundo y me vengo a ti Dios mio bolando con las dos Alas del Amor y temor que tu mismo Amor me ofrese tan de gracia y tan de grado que no se duentildeo mio con que lo responder a tan soberano beneficio y finesa de tus entrantildeas de Amorvengo Sentildeor y esposo mio unicamente a descansar en ti pues los peli-gros del camino me an puesto en mucho sobresalto temiendo el per-derte y sin ti perderme para siempre por una eternidad sin fin pues deseo amado mio ganarme ganandote a ti y vivir en ti aora en vida y despues eternamente y estos cuidados me traen fatigada molida y cansada y no podre tener alivio y descanso sino viendome entre tus brassos aunque sea estando en cruz pues ese es el fin de mis deseos vivir y morir en ti ablame mi cordero manso y ensentildeame a que ver-daderamente te ame como fiel esposa ea mi caro amigo dame la ma-no pues sabes Amor mio que en mi no ay mano sin tu misma mano y asi mi Dios y Sentildeor mi Principe Soberano con umilde rendimiento y deseos de alcansarte te suplico me des la mano y me consueles en estos mis trabajos Deseo Sentildeor vivir en paz y los malos amores de mi Naturaleza flaca no me dejan detentar y no quieren por mi desgrasia atropellar con las leyes de tu Amor ni quisiera perturbar mi corason quando me veo con un torvellino de olas y contratiempos que a menu-do me suelen sercar pero si tu Sentildeor me das la mano nada temo sino que me aseguro y vivire en paz sin que me fatiguen los contratiempos pues mi mano en la tuya y mi espiritu en el tuyo por mas borrascas que me envistan no seran bastantes para rendir mi voluntad a la suya bien si para pronunsiar un fiat que resuene bien atras en tus oidos y que en medio de mis fatigas me ponga a cantar tus divinas misericor-dias hea Sentildeor ya pretendo serrar mis labios por no desir mas bove-rias y deseo Sentildeor oir tus palabras de vida eterna abla Sentildeor que tu sierva oye con atension y cuydado mira mi Dios que se me ase tarde y espero con prisa deseando saborearme y aprovecharme de los ecos de tu Santa dotrina pues todas tus palabras saben a eterna vida callen pues mis sentidos y potensias y todo se ponga en paz pues mi dulse y soberano Sentildeor no se escusara de ablar me aun que en mudo silensio hea mi gran Prinsipe de la paz ablame que tus puros amores me traen perdida por estos asperos montes y mis cortos pasos no te pueden dar alcanse mirame mi Dios a tus pies postrada como un vil gusano y me-nor ormiga de la tierraabla Jesus y dise a su esposa el Alma querida esposa mia que me pides y por que te muestras tan fatigada y mal sufrida no vives como corde-rita del campo buscando de mis pechos el sustancial pasto mi Amor no te sustenta y mi grasia te promete eterna vida pues dime amada de que te fatigas y te muestras mal sufrida mira que te amo con Amor de padre y con Amor de esposo el mas fino y puro enamorado que no tan solo me presio de darte mi mano sino tambien todo mi cuerpo y

175ESPANtildeOLAS DE ULTRAMAR EN LA HISTORIA Y EN LA LITERATURA

sangre para que con mi pan de vida te sustentes y te regales a tus an-churas y que con mi propio espiritu vivas en paz como tu lo deseas y que mis amores sean unico alivio en tus trabajos en esta mortal vida pues si esto es asi y sabes que muero por darte vida dime esposa mia de que te fatigas Dame querida tus brassos y dime si me amas como yo te amoResponde el Alma152 Tu mi Dios sabes si yo te amo pues de mi solo se que mis deseos y ansias buelan a ti mas no alcanso a saber si te amo como tu de-seas ser amado y como desconfio tanto de mi y de mis prosederes falssos temo Dios mio perderme y perderte y asi Sentildeor pues no desechas mis Amores y te muestras tan fino en amarme te pido me ensentildees a vivir segun las leyes de tu pura verdad y fina condisionhija mia dise Dios la prueva de un verdadero Amor consiste en sufrir callar y padeser por mi unico Amor y en todo seguir mis pasos sin ja-mas retroseder por mas fragoso que se muestre el camino pues nunca seran tantas las espinas las escarchas ni las nieves ni los vientos bo-rrascosos que te se ofrescan pasar por mi Amor como los que mi tierno y desinteresado Amor paso por ti y siempre con mis pies descalssos y asi hija y esposa mia muestrate costante en seguir lo perfecto de mis passos pues mi braso fuerte sera en ti y peleara por ti y te sera el todo en tus nesesidades y mi Amor te convertira en dulse y suave lo amargo y molesto a la condision de la carrne

Responde el Alma

O mi enamorado Jesus O mi dulse y tierno amanteO alegria de los sielos O dulse Jesus amable

(Toda Sentildeor me derrito toda Sentildeor me desagoy quiero vivir por ti ea sentildeor abrasadme) [Tachado en el original]

Toda Sentildeor me derrito toda Sentildeor me desagoy quiero morir por vos ea Sentildeor que ya acabo

Ya tus amores me llaman ya tus perfumes me traencon suspiros y agonias Sentildeor asta que te alcanse

O mi Jesus amoroso no puedo mas dilatarmeya la pasiensia me falta dulse Jesus abrasadme

(No puedo vivir sin vos no puedo mas dilatarmeya la pasiensia me falta dulse) [Tachado en el original]

No puedo vivir sin vos mi dulse Jesus amablepues me teneis echisada siendo mi esposo y mi Padre

152 La aparicioacuten de una mayuacutescula al principio de una oracioacuten es algo totalmente arbitrario en este ma-nuscrito dada la libertad ortograacutefica de la autora Como se puede observar en la mayor parte de las veces no es el caso

176 JUAN FRANCISCO MAURA

Ay que me abraso Ay que me quemo del Amor deJesus nasareno como no tocan y tantildeen a fuego

Responde Jesus Hija mia tus simples vozes oygo y aunque resuenan bien a mis oidos pero te deseo mas mansa y pasifica en tus fervores ya sabes que no siempre as de vivir en mantillas ni a los pechos de tu Madre por que es rason que padescas con espiritu fuerte como mu-jer valerosa por que a una esposa del Rey soberano y prinsipe de la paz no le estan bien chiquerias ni fervores de nintildea malcriada y ya es ora que la destete su Madre la Naturaleza y que empesando su nueva vida camine con el favor de mi grasia sigiendo mis passos de eterna vida esto con sus pies descalssos segun mis leyes de Amor puro y desinteresado lo tienen ordenado153 y vivir en paz como lo deje en-cargado a mis apostoles Santos repitiendoles varias vezes Vivir en pas y caridad esto es un vivir en Dios y Dios en el Alma y asi hija mia el Alma que vive en paz vive en mi Como mis cortesanos en el cielo y pues me pides que te ensentildee a vivir segun las leyes de mi condision Repito el desir que te debes mostrar sufrida en todo tiempo y estado sin permitir en tu corason que ni aun los fervores se adelanten con estremos ni ademanes sino atiende y aprende de mi purisima Madre pues siempre la veras si bien lo consideras que mientras vivio en el mundo en todos sus trabajos se mostro firme fuerte costante como piedra diamante Pues mirandome nintildeo entre sus brasos desnudo en el pesebre desnudo y crusificado en los brassos de una cruz En estos y otros passos no se mudo su rostro sino que en suma serenidad y pasifico corason toda se sacrificaba enteramente en los brassos de mi Amor y rendido su corason y voluntad en la de mi eterno Padre por ejemplo te la doy y deseo que aprendas de sus nobles calidades pues te aseguro carisima que las leyes de mi condision y pura verdad todo lo allaras enserrado en el corason de mi purisima Madre sedle fiel y descansaras en paz

+

Quartillas a un alma que padese soledad interior

1Un Alma afligida y tristese ve en un campo desiertay en el su esposo la tieneAtormentada y sedienta

153 Es a traveacutes de estas liacuteneas lo que hace suponer que la autora de este diaacutelogo amoroso entre el Alma y Je-suacutes es novicia esto es laquoque estaacute empesando su nueva vidaraquo En las mismas liacuteneas una vez maacutes se hace alusioacuten al laquodesteteraquo de su vida civil laquoa una esposa del Rey soberano y principe de la paz no le estan bien chiquerias ni fervores de nintildea malcriada y ya es ora que la destete su Madre la naturalesaraquo (fol 5)

177ESPANtildeOLAS DE ULTRAMAR EN LA HISTORIA Y EN LA LITERATURA

2Pendiente se ve en el AyreSolo un hilo la sustentasin tocar el pie en el sueloporque del no tome tierra

3Mirandola esta yto a ytoaquel sol que la atraviesay la enviste con sus rayosmas ella no pestantildeea

4Como sigarra padese y como a tal se atormentabatiendo sus mismas Alasy el corason se atraviesa

5Con penas sustos temoresquando se mira assi mesmasin tener valor en nadaporque es la misma flaquesa

6Pero el Amor de su esposotoda su atension le llevay la pone en un abismopero cubierto en tiniebla

7Desea dar algun bueloy subir con ligeresapero se mira travadacon una fuerte cadena

8Clama suspira y padeseMas del todo se sujetaRindiendo su voluntadA la divina clemencia

9Los enemigos del AlmaCruelmente le asen guerray ella aunque firme y constantelos reselos la atormentan

178 JUAN FRANCISCO MAURA

10de todos modos padeseaunque gosa la asistensiadel divino esposo amadoque en su interior se recrea

11Solo de verla penary con verla tan serenadise resibe mil gustosde su sigarra pequentildea

12Le sabe el mundo a mil yelesy su trato le atormentaviendo en el mil falsedadesque todas saben a tierra

13Para poderse librardeja de correr y buelacon las Alas del Amory el mismo Amor se la lleva

Una vida dedicada a un amor divino un amor que le haraacute llenar un buen nuacutemero de cuartillas dedicadas a tan alta empresa Se desconoce si la vocacioacuten de Sor Nada con-tinuoacute con tanta intensidad el resto de sus diacuteas Ciertamente la vida en el covento no era faacutecil En algunos casos la experiencia era traumaacutetica incluso fatal para algunas de las adolescentes de la Ameacuterica Espantildeola Las reglas del claustro eran severas por varias razones Estas joacutevenes si no teniacutean el permiso de la superiora no podiacutean recibir visitas no podiacutean volver a sus casas su correspondencia era censuraba y no podiacutean salir del periacutemetro conventual Igualmente se levantaban antes del amanecer para oir misa tra-bajaban el resto del diacutea y lo maacutes interesante es que muchas veces esta vida era aceptada por muchas

Page 40: Tercera parte: Mujeres en la vida intelectual - …parnaseo.uv.es/Editorial/Maura/TerceraParte.pdf · La Biblia, por su parte, hace repetidas menciones de la mujer y sobre el comporta-

170 JUAN FRANCISCO MAURA

alto contenido eroacutetico con sustantivos y metaacuteforas que recuerdan la maacutes iacutentima unioacuten amorosa en unos casos y el tierno amor maternal en otros

[T]e miro Jesus mio desnudo a las inclemencias del tiempo y ardien-do en puro fuego de Amor por la salud de las Almas y me ensentildeas a que te ame con todo mi corason y puresa de espiritu No atendiendo ni buscando umanos intereses ni a solisitar consuelos ni regalos espi-rituales que suelen empantildear la puresa del noble corason No mi Jesus amable pues antes me ensentildeaste tu puro Amor que desnudo sean [sic] de encaminar mis passos desde el pesebre asta la cuna en donde te miro tan desnudo como el pesebre y todo Sentildeor por mi Amor (Mss 12959 26 hoja 1 v)

El manuscrito (12959 27) de la mencionada serie de tres contiene algunas correccio-nes quizaacute hechas por el confesor o quizaacute por ella misma cuando se dirige con excesiva familiaridad y arrebatado fervor a su Amado148 He escogido el manuscrito (12959 Caja 28) en primer lugar por ser el ejemplo maacutes representativo de su poesiacutea y prosa En este manuscrito encontramos de forma maacutes directa que alegoacuterica toda la frescura de un diaacutelogo entre Jesuacutes y el alma que raya como diriacutea Cervantes laquoa la llana y sin rodeosraquo (667 lib 2 cap 38) con el doloroso y a veces desesperado deseo de la entrega y la unioacuten final con el Amado La ortografiacutea no ha sido corregida respetaacutendose el texto ori-ginal149 Veamos el siguiente fragmento

Mira que te amo con Amor de padre y con Amor de esposo el mas fino y puro enamorado que no tan solo me presio de darte mi mano sino tambien todo mi cuerpo y sangre para que con mi pan de vida te sustentes y te regales a tus anchuras y que con mi propio espiritu vivas en paz como tu lo deseas y que mis amores sean unico alivio en tus trabajos en esta mortal vida pues si esto es asi y sabes que muero por darte vida dime esposa mia de que te fatigas Dame querida tus bras-sos y dime si me amas como yo te amo (Hoja 4)

148 La antologiacutea de Promis ha procurado insertar entre los textos antoloacutegicos algunos que se refieren a la es-critura de mujeres fundamentalmente de aquellos generados en el interior de los espacios conventuales Estos textos se fundan como laquohistorias de vidasraquo y responden casi siempre a los requerimientos de los confesores de las monjas coloniales En este sentido resulta valiosiacutesima la incorporacioacuten de la llamada Relacioacuten autobiograacute-fica de Sor Ursula Suaacuterez como una muestra significativa de la escritura monjil entendida en esta eacutepoca (como tambieacuten en la tradicioacuten europea medieval) inserta en las denominadas laquolabores de manoraquo de las religiosas ya que el texto escrito por mandato se convertiacutea en una suerte de entramado o tejido linguumliacutestico es decir en un nuevo bordado que la mayor parte de las veces el confesor convertido en censor iba haciendo tachando y enmendando En la antologiacutea Promis agrega un texto de Sor Tadea Garciacutea de la Huerta titulado Relacioacuten de la inundacioacuten que hizo el riacuteo Mapocho de la ciudad de Santiago de Chile en el monasterio de Carmelitas titular de San Rafael el diacutea 16 de junio de 1783 se trata de un poema tipo romance escrito en versos octosilaacutebicos y que da cuenta de lo sucedido ese diacutea en el convento (Resentildea de la literatura del reino de Chile de Joseacute Promis Eddie Morales Pintildea httpwwwupaclpublicaciones2002literatura_promishtm)

149 Son frecuentes las faltas ortograacuteficas Una de ellas es el uso constante del seseo La ausencia de acentua-cioacuten y puntuacioacuten exceptuando alguacuten punto o coma arbitrario no seguido casi nunca de mayuacutescula inicial lo mismo que el uso igualmente aribitrario de la h o de b v r q g j m n x etc No olvidemos de la misma forma la laxitud linguumliacutestica existente en el siglo XVII (no sabemos a queacute parte de eacuteste pertenece el manuscrito) asiacute como la joven edad de la monja

171ESPANtildeOLAS DE ULTRAMAR EN LA HISTORIA Y EN LA LITERATURA

Los versos del presente manuscrito poseen la misma fuerza que tiene su prosa Con una estructura estroacutefica indefinida estaacuten aparentemente corregidos por alguien que tu-vo la oportunidad de conocer personalmente a la autora Muy probablemente se trate del padre al que hace referencia al principio del primer manuscrito laquoMandame el Pd que le declare en que consiste un verdadero amor a Diosraquo a continuacioacuten continuacutea con su caracteriacutestica humildad laquo[O]bedesere y dire lo q Dios me inspire segun mi rudesa y simplisidadraquo (Mss 12959 26) En cuanto a la fuerza pasional de esta joven observamos con cierta tristeza coacutemo aparece sublimada en sus escritos con toda la enegiacutea de una joven mujer llena de intensidad y vida pero encerrada en los liacutemites de un convento Veamos un ejemplo en donde responde el Alma en los siguientes versos

O mi enamorado Jesus O mi dulse y tierno amanteO alegria de los sielos O dulse Jesus amable

(Toda Sentildeor me derrito toda Sentildeor me desagoy quiero vivir por ti ea sentildeor abrasadme) [Tachado en el original]

Toda Sentildeor me derrito toda Sentildeor me desagoy quiero morir por vos ea Sentildeor que ya acabo

Ya tus amores me llaman ya tus perfumes me traencon suspiros y agonias Sentildeor hasta que te alcanse

O mi Jesus amoroso no puedo mas dilatarmeya la pasiensia me falta dulse Jesus abrasadme

(No puedo vivir sin vos no puedo mas dilatarmeya la pasiensia me falta dulse) [Tachado en el original]

No puedo vivir sin vos mi dulse Jesus amablepues me teneis echisada siendo mi esposo y mi Padre

Ay que me abraso Ay que me quemo del Amor deJesus nasareno como no tocan y tantildeen a fuego150

Estos versos llenos de arrebato sublimado conectan con toda la tradicioacuten miacutestica es-pantildeola que se remonta a Ramoacuten Llul y que culmina en el maacutes universal de nuestros

150 En toda la fuerza y simbologiacutea del amor maacutes iacutentimo del maacutes alto y sublime placer de la unioacuten de los amantes tal como lo encontramos en el Cantar de los Cantares y en San Juan de la Cruz Leemos en la Biblia

Ya me he quitado la tuacutenica iquestCoacutemo volver a vestirme Ya me he lavado los pies iquestCoacutemo volver a ensuciarlosMi amado metioacute su mano por el agujero (de la llave) y mis entrantildeas se estremecieron por eacutel Me levanteacute para abrir a mi amado Mis manos destilaron mirra y mis dedos mirra exquisita en el pestillo de la cerradura (5 3-5)

Nos ocurre lo mismo con San Juan de la Cruz en su insuperable poema laquoLlama de amor vivaraquo

iexclOh cauterio suaveiexclOh regalada llagaiexclOh mano blanda iexclOh toque delicadoque a vida eterna sabey toda deuda pagaMatando muerte en vida la has trocado

172 JUAN FRANCISCO MAURA

miacutesticos San Juan de la Cruz Esta tradicioacuten se extiende hasta finales del siglo XVII esto es hasta los finales del Barroco siendo un poco maacutes tardiacuteo en la Ameacuterica espantildeola Sin tener como propoacutesito discutir en el presente trabajo a queacute corriente miacutestica pertenece la obra de Sor Nada es necesario resaltar no obstante el hecho de que estaacute escrito por una mujer y ademaacutes de tierna edad El manuscrito 12959 Caja 26 termina con estas pa-labras laquo[T]odas estas boverias escrivi por entretenimiento siendo resien profesa en la religion Sor Nadaraquo Mas no por la juventud de su autora los escritos dejan de tener lo-gradas metaacuteforas imaacutegenes y siacutembolos sacados de la naturaleza La alegoriacutea de la unioacuten matrimonial poseeacute el fuego liacuterico de la maacutes apasionada de las relaciones amorosas vivi-ficada por perfumes flores insectos animales escarchas nieves o abrojos Por lo tanto aunque la narracioacuten destile cierta ingenuidad no carece por ello de un vocabulario rico con el sabor popular de la poesiacutea de los cancioneros y romances de tradicioacuten renacen-tista No ha sido otra mi intencioacuten que la de rescatar del olvido unos escritos en prosa y en verso llenos de frescura y espontaneidad que nos muestran la pasioacuten con que la joven novicia se laquoentrega en cuerpo y almaraquo a los menesteres de su profesioacuten guiada por un padre espiritual en esos primeros antildeos de formacioacuten Esta ha sido la razoacuten por la que presento a continuacioacuten el citado manuscrito en su totalidad

Sor Nada (Mss 1295928)

laquoEsplicacion sobre en que consiste la paz del AlmaraquolaquoQuartillas a un Alma que padece soledad interiorraquo

[7 hojas utiles en 4ordm letra del siglo XVII]

+

Esplicacion sobre en que consiste la paz del Alma

Pareseme segun mi rudo entender que la verdadera paz del Alma con-siste en una muy pura y buena consiencia en un corason liso y bien intensionado en una verdadera rectitud de espiritu en el qual el Alma procura bolar a Dios sin jamas detenerse a respetos umanos ni reparar en que me diran ni de que me censuraran sino me apresuro a seguir a unos entenderes y pareseres dorados en los quales pretende el mundo engantildear y ensuciar si se puede la puresa de un corason unicamente de Dios y de su Santa ley y se lo conserva cristalino con la divina asis-tencia de la gracia y comprendido de su Amor y temor siguiendo la luz divina de tan amante Sentildeor Dios y ombre verdadero con que este ilustrado corason ni se altera ni se mueve por los disfrasses dorados que ase el mundo y sus moradores mayormente con falssas amistades aunque con ellos muestre buena intension Con la misma grasia y luz de Dios conose el buen corason estos disfrasses que le ase el mundo y se retira de todo con espiritu y valor esto sin la menor alterasion sino que en suma paz se retira a buscar a Dios dentro de su mismo corason

173ESPANtildeOLAS DE ULTRAMAR EN LA HISTORIA Y EN LA LITERATURA

y se abrasa con su pura verdad en la qual se le descubren mil interio-res secretos tan solidos puros y verdaderos que la misma Alma queda abismada y de puro grandes no los puede bien comprender ni esplicar pero estos mismos secretos divinos le sirven de espuelas para no solo correr sino bolar con pies de plumas en seguimiento de su bien ama-do Jesus y como este soberano Sentildeor es tan amante de sus espossas las Almas luego que la ve bolar con pies de plumas la sale al encuen-tro en despoblado campo que se deve de llamar Campo de Amor de Dios y el mismo Sentildeor se viene a las manos por ser Dios que nos ama con Amor infinito de Padre benigno y amoroso con que asiendose en contra deso este divino enamorado en lo interyor de el Alma que le busca con ansias de servirle y amarle y en aquella soledad traban una conversasion amorosa y sensilla como la pluma simple de quien esto escrive

Divino enquentroDios y el Alma en la soledad

O Soberano Principe de la paz dise el Alma tus perfumes me traen a ti bolando porque alla en el mundo y sus valedores me pretendian engantildear y entretenerme con pegaminossas amistades que facilmen-te me pudieran envenenar y matarme apartandome de ti Mi dulse Jesus amable mi Redentor Soberano que con tantas ansias me sales al enquentro como siervo [ciervo] erido de mis Amores los quales tu Amor me ofrese para que con tu mismo Amor te ame y te sirva en paz sin perturbarme ni contristarme ni cansarme de padeser pasando si se ofrese por escarchas nieves espinas ni abrojos ni por otros diverssos trabajos ni piedras de contradision que tu me puedes permitir pues por mas que el mar se levante con sus ferosses olas contra mi ni piedras se me tiren al rostro en todo Sentildeor me quieres con serenidad pasifica sin la menor perturbasion Todo Sentildeor quieres que lo tome con Serenidad de espiritu y asi vengo a ti bolando para que mejor me ensentildees a vivir segun las leyes de tu noble condision que me son muy agradables por mas que el mundo me las despresie por segir sus vanidades y torsidas intensiones con apariensias de bien y con este engantildeo y bien me quie-ro mas a mi que no a mi proximo veo que segun mi pareser se pierden muchas Almas y tambien de aquellos que se depresian y pasan por muy espirituales Con que me paresen pocos los que llegan a padeser con desnudes151 de espiritu por tu purisimo Amor y me parese essas se quedan muy atrasadas en la virtud por el peligro de bolver muy atras el paso de modo que se pueden despentildear y pereser en su misma desgra-sia ya por soberbia o por otras enfermedades que se les pega al corason y asi lo pasan como siegos ignorantes sin advertir en sus peligros

151 La letra en cursiva es miacutea

174 JUAN FRANCISCO MAURA

este aquerdo Sentildeor y otros que tu verdad me ensentildea me ase venir uyendo de las paredes del mundo y me vengo a ti Dios mio bolando con las dos Alas del Amor y temor que tu mismo Amor me ofrese tan de gracia y tan de grado que no se duentildeo mio con que lo responder a tan soberano beneficio y finesa de tus entrantildeas de Amorvengo Sentildeor y esposo mio unicamente a descansar en ti pues los peli-gros del camino me an puesto en mucho sobresalto temiendo el per-derte y sin ti perderme para siempre por una eternidad sin fin pues deseo amado mio ganarme ganandote a ti y vivir en ti aora en vida y despues eternamente y estos cuidados me traen fatigada molida y cansada y no podre tener alivio y descanso sino viendome entre tus brassos aunque sea estando en cruz pues ese es el fin de mis deseos vivir y morir en ti ablame mi cordero manso y ensentildeame a que ver-daderamente te ame como fiel esposa ea mi caro amigo dame la ma-no pues sabes Amor mio que en mi no ay mano sin tu misma mano y asi mi Dios y Sentildeor mi Principe Soberano con umilde rendimiento y deseos de alcansarte te suplico me des la mano y me consueles en estos mis trabajos Deseo Sentildeor vivir en paz y los malos amores de mi Naturaleza flaca no me dejan detentar y no quieren por mi desgrasia atropellar con las leyes de tu Amor ni quisiera perturbar mi corason quando me veo con un torvellino de olas y contratiempos que a menu-do me suelen sercar pero si tu Sentildeor me das la mano nada temo sino que me aseguro y vivire en paz sin que me fatiguen los contratiempos pues mi mano en la tuya y mi espiritu en el tuyo por mas borrascas que me envistan no seran bastantes para rendir mi voluntad a la suya bien si para pronunsiar un fiat que resuene bien atras en tus oidos y que en medio de mis fatigas me ponga a cantar tus divinas misericor-dias hea Sentildeor ya pretendo serrar mis labios por no desir mas bove-rias y deseo Sentildeor oir tus palabras de vida eterna abla Sentildeor que tu sierva oye con atension y cuydado mira mi Dios que se me ase tarde y espero con prisa deseando saborearme y aprovecharme de los ecos de tu Santa dotrina pues todas tus palabras saben a eterna vida callen pues mis sentidos y potensias y todo se ponga en paz pues mi dulse y soberano Sentildeor no se escusara de ablar me aun que en mudo silensio hea mi gran Prinsipe de la paz ablame que tus puros amores me traen perdida por estos asperos montes y mis cortos pasos no te pueden dar alcanse mirame mi Dios a tus pies postrada como un vil gusano y me-nor ormiga de la tierraabla Jesus y dise a su esposa el Alma querida esposa mia que me pides y por que te muestras tan fatigada y mal sufrida no vives como corde-rita del campo buscando de mis pechos el sustancial pasto mi Amor no te sustenta y mi grasia te promete eterna vida pues dime amada de que te fatigas y te muestras mal sufrida mira que te amo con Amor de padre y con Amor de esposo el mas fino y puro enamorado que no tan solo me presio de darte mi mano sino tambien todo mi cuerpo y

175ESPANtildeOLAS DE ULTRAMAR EN LA HISTORIA Y EN LA LITERATURA

sangre para que con mi pan de vida te sustentes y te regales a tus an-churas y que con mi propio espiritu vivas en paz como tu lo deseas y que mis amores sean unico alivio en tus trabajos en esta mortal vida pues si esto es asi y sabes que muero por darte vida dime esposa mia de que te fatigas Dame querida tus brassos y dime si me amas como yo te amoResponde el Alma152 Tu mi Dios sabes si yo te amo pues de mi solo se que mis deseos y ansias buelan a ti mas no alcanso a saber si te amo como tu de-seas ser amado y como desconfio tanto de mi y de mis prosederes falssos temo Dios mio perderme y perderte y asi Sentildeor pues no desechas mis Amores y te muestras tan fino en amarme te pido me ensentildees a vivir segun las leyes de tu pura verdad y fina condisionhija mia dise Dios la prueva de un verdadero Amor consiste en sufrir callar y padeser por mi unico Amor y en todo seguir mis pasos sin ja-mas retroseder por mas fragoso que se muestre el camino pues nunca seran tantas las espinas las escarchas ni las nieves ni los vientos bo-rrascosos que te se ofrescan pasar por mi Amor como los que mi tierno y desinteresado Amor paso por ti y siempre con mis pies descalssos y asi hija y esposa mia muestrate costante en seguir lo perfecto de mis passos pues mi braso fuerte sera en ti y peleara por ti y te sera el todo en tus nesesidades y mi Amor te convertira en dulse y suave lo amargo y molesto a la condision de la carrne

Responde el Alma

O mi enamorado Jesus O mi dulse y tierno amanteO alegria de los sielos O dulse Jesus amable

(Toda Sentildeor me derrito toda Sentildeor me desagoy quiero vivir por ti ea sentildeor abrasadme) [Tachado en el original]

Toda Sentildeor me derrito toda Sentildeor me desagoy quiero morir por vos ea Sentildeor que ya acabo

Ya tus amores me llaman ya tus perfumes me traencon suspiros y agonias Sentildeor asta que te alcanse

O mi Jesus amoroso no puedo mas dilatarmeya la pasiensia me falta dulse Jesus abrasadme

(No puedo vivir sin vos no puedo mas dilatarmeya la pasiensia me falta dulse) [Tachado en el original]

No puedo vivir sin vos mi dulse Jesus amablepues me teneis echisada siendo mi esposo y mi Padre

152 La aparicioacuten de una mayuacutescula al principio de una oracioacuten es algo totalmente arbitrario en este ma-nuscrito dada la libertad ortograacutefica de la autora Como se puede observar en la mayor parte de las veces no es el caso

176 JUAN FRANCISCO MAURA

Ay que me abraso Ay que me quemo del Amor deJesus nasareno como no tocan y tantildeen a fuego

Responde Jesus Hija mia tus simples vozes oygo y aunque resuenan bien a mis oidos pero te deseo mas mansa y pasifica en tus fervores ya sabes que no siempre as de vivir en mantillas ni a los pechos de tu Madre por que es rason que padescas con espiritu fuerte como mu-jer valerosa por que a una esposa del Rey soberano y prinsipe de la paz no le estan bien chiquerias ni fervores de nintildea malcriada y ya es ora que la destete su Madre la Naturaleza y que empesando su nueva vida camine con el favor de mi grasia sigiendo mis passos de eterna vida esto con sus pies descalssos segun mis leyes de Amor puro y desinteresado lo tienen ordenado153 y vivir en paz como lo deje en-cargado a mis apostoles Santos repitiendoles varias vezes Vivir en pas y caridad esto es un vivir en Dios y Dios en el Alma y asi hija mia el Alma que vive en paz vive en mi Como mis cortesanos en el cielo y pues me pides que te ensentildee a vivir segun las leyes de mi condision Repito el desir que te debes mostrar sufrida en todo tiempo y estado sin permitir en tu corason que ni aun los fervores se adelanten con estremos ni ademanes sino atiende y aprende de mi purisima Madre pues siempre la veras si bien lo consideras que mientras vivio en el mundo en todos sus trabajos se mostro firme fuerte costante como piedra diamante Pues mirandome nintildeo entre sus brasos desnudo en el pesebre desnudo y crusificado en los brassos de una cruz En estos y otros passos no se mudo su rostro sino que en suma serenidad y pasifico corason toda se sacrificaba enteramente en los brassos de mi Amor y rendido su corason y voluntad en la de mi eterno Padre por ejemplo te la doy y deseo que aprendas de sus nobles calidades pues te aseguro carisima que las leyes de mi condision y pura verdad todo lo allaras enserrado en el corason de mi purisima Madre sedle fiel y descansaras en paz

+

Quartillas a un alma que padese soledad interior

1Un Alma afligida y tristese ve en un campo desiertay en el su esposo la tieneAtormentada y sedienta

153 Es a traveacutes de estas liacuteneas lo que hace suponer que la autora de este diaacutelogo amoroso entre el Alma y Je-suacutes es novicia esto es laquoque estaacute empesando su nueva vidaraquo En las mismas liacuteneas una vez maacutes se hace alusioacuten al laquodesteteraquo de su vida civil laquoa una esposa del Rey soberano y principe de la paz no le estan bien chiquerias ni fervores de nintildea malcriada y ya es ora que la destete su Madre la naturalesaraquo (fol 5)

177ESPANtildeOLAS DE ULTRAMAR EN LA HISTORIA Y EN LA LITERATURA

2Pendiente se ve en el AyreSolo un hilo la sustentasin tocar el pie en el sueloporque del no tome tierra

3Mirandola esta yto a ytoaquel sol que la atraviesay la enviste con sus rayosmas ella no pestantildeea

4Como sigarra padese y como a tal se atormentabatiendo sus mismas Alasy el corason se atraviesa

5Con penas sustos temoresquando se mira assi mesmasin tener valor en nadaporque es la misma flaquesa

6Pero el Amor de su esposotoda su atension le llevay la pone en un abismopero cubierto en tiniebla

7Desea dar algun bueloy subir con ligeresapero se mira travadacon una fuerte cadena

8Clama suspira y padeseMas del todo se sujetaRindiendo su voluntadA la divina clemencia

9Los enemigos del AlmaCruelmente le asen guerray ella aunque firme y constantelos reselos la atormentan

178 JUAN FRANCISCO MAURA

10de todos modos padeseaunque gosa la asistensiadel divino esposo amadoque en su interior se recrea

11Solo de verla penary con verla tan serenadise resibe mil gustosde su sigarra pequentildea

12Le sabe el mundo a mil yelesy su trato le atormentaviendo en el mil falsedadesque todas saben a tierra

13Para poderse librardeja de correr y buelacon las Alas del Amory el mismo Amor se la lleva

Una vida dedicada a un amor divino un amor que le haraacute llenar un buen nuacutemero de cuartillas dedicadas a tan alta empresa Se desconoce si la vocacioacuten de Sor Nada con-tinuoacute con tanta intensidad el resto de sus diacuteas Ciertamente la vida en el covento no era faacutecil En algunos casos la experiencia era traumaacutetica incluso fatal para algunas de las adolescentes de la Ameacuterica Espantildeola Las reglas del claustro eran severas por varias razones Estas joacutevenes si no teniacutean el permiso de la superiora no podiacutean recibir visitas no podiacutean volver a sus casas su correspondencia era censuraba y no podiacutean salir del periacutemetro conventual Igualmente se levantaban antes del amanecer para oir misa tra-bajaban el resto del diacutea y lo maacutes interesante es que muchas veces esta vida era aceptada por muchas

Page 41: Tercera parte: Mujeres en la vida intelectual - …parnaseo.uv.es/Editorial/Maura/TerceraParte.pdf · La Biblia, por su parte, hace repetidas menciones de la mujer y sobre el comporta-

171ESPANtildeOLAS DE ULTRAMAR EN LA HISTORIA Y EN LA LITERATURA

Los versos del presente manuscrito poseen la misma fuerza que tiene su prosa Con una estructura estroacutefica indefinida estaacuten aparentemente corregidos por alguien que tu-vo la oportunidad de conocer personalmente a la autora Muy probablemente se trate del padre al que hace referencia al principio del primer manuscrito laquoMandame el Pd que le declare en que consiste un verdadero amor a Diosraquo a continuacioacuten continuacutea con su caracteriacutestica humildad laquo[O]bedesere y dire lo q Dios me inspire segun mi rudesa y simplisidadraquo (Mss 12959 26) En cuanto a la fuerza pasional de esta joven observamos con cierta tristeza coacutemo aparece sublimada en sus escritos con toda la enegiacutea de una joven mujer llena de intensidad y vida pero encerrada en los liacutemites de un convento Veamos un ejemplo en donde responde el Alma en los siguientes versos

O mi enamorado Jesus O mi dulse y tierno amanteO alegria de los sielos O dulse Jesus amable

(Toda Sentildeor me derrito toda Sentildeor me desagoy quiero vivir por ti ea sentildeor abrasadme) [Tachado en el original]

Toda Sentildeor me derrito toda Sentildeor me desagoy quiero morir por vos ea Sentildeor que ya acabo

Ya tus amores me llaman ya tus perfumes me traencon suspiros y agonias Sentildeor hasta que te alcanse

O mi Jesus amoroso no puedo mas dilatarmeya la pasiensia me falta dulse Jesus abrasadme

(No puedo vivir sin vos no puedo mas dilatarmeya la pasiensia me falta dulse) [Tachado en el original]

No puedo vivir sin vos mi dulse Jesus amablepues me teneis echisada siendo mi esposo y mi Padre

Ay que me abraso Ay que me quemo del Amor deJesus nasareno como no tocan y tantildeen a fuego150

Estos versos llenos de arrebato sublimado conectan con toda la tradicioacuten miacutestica es-pantildeola que se remonta a Ramoacuten Llul y que culmina en el maacutes universal de nuestros

150 En toda la fuerza y simbologiacutea del amor maacutes iacutentimo del maacutes alto y sublime placer de la unioacuten de los amantes tal como lo encontramos en el Cantar de los Cantares y en San Juan de la Cruz Leemos en la Biblia

Ya me he quitado la tuacutenica iquestCoacutemo volver a vestirme Ya me he lavado los pies iquestCoacutemo volver a ensuciarlosMi amado metioacute su mano por el agujero (de la llave) y mis entrantildeas se estremecieron por eacutel Me levanteacute para abrir a mi amado Mis manos destilaron mirra y mis dedos mirra exquisita en el pestillo de la cerradura (5 3-5)

Nos ocurre lo mismo con San Juan de la Cruz en su insuperable poema laquoLlama de amor vivaraquo

iexclOh cauterio suaveiexclOh regalada llagaiexclOh mano blanda iexclOh toque delicadoque a vida eterna sabey toda deuda pagaMatando muerte en vida la has trocado

172 JUAN FRANCISCO MAURA

miacutesticos San Juan de la Cruz Esta tradicioacuten se extiende hasta finales del siglo XVII esto es hasta los finales del Barroco siendo un poco maacutes tardiacuteo en la Ameacuterica espantildeola Sin tener como propoacutesito discutir en el presente trabajo a queacute corriente miacutestica pertenece la obra de Sor Nada es necesario resaltar no obstante el hecho de que estaacute escrito por una mujer y ademaacutes de tierna edad El manuscrito 12959 Caja 26 termina con estas pa-labras laquo[T]odas estas boverias escrivi por entretenimiento siendo resien profesa en la religion Sor Nadaraquo Mas no por la juventud de su autora los escritos dejan de tener lo-gradas metaacuteforas imaacutegenes y siacutembolos sacados de la naturaleza La alegoriacutea de la unioacuten matrimonial poseeacute el fuego liacuterico de la maacutes apasionada de las relaciones amorosas vivi-ficada por perfumes flores insectos animales escarchas nieves o abrojos Por lo tanto aunque la narracioacuten destile cierta ingenuidad no carece por ello de un vocabulario rico con el sabor popular de la poesiacutea de los cancioneros y romances de tradicioacuten renacen-tista No ha sido otra mi intencioacuten que la de rescatar del olvido unos escritos en prosa y en verso llenos de frescura y espontaneidad que nos muestran la pasioacuten con que la joven novicia se laquoentrega en cuerpo y almaraquo a los menesteres de su profesioacuten guiada por un padre espiritual en esos primeros antildeos de formacioacuten Esta ha sido la razoacuten por la que presento a continuacioacuten el citado manuscrito en su totalidad

Sor Nada (Mss 1295928)

laquoEsplicacion sobre en que consiste la paz del AlmaraquolaquoQuartillas a un Alma que padece soledad interiorraquo

[7 hojas utiles en 4ordm letra del siglo XVII]

+

Esplicacion sobre en que consiste la paz del Alma

Pareseme segun mi rudo entender que la verdadera paz del Alma con-siste en una muy pura y buena consiencia en un corason liso y bien intensionado en una verdadera rectitud de espiritu en el qual el Alma procura bolar a Dios sin jamas detenerse a respetos umanos ni reparar en que me diran ni de que me censuraran sino me apresuro a seguir a unos entenderes y pareseres dorados en los quales pretende el mundo engantildear y ensuciar si se puede la puresa de un corason unicamente de Dios y de su Santa ley y se lo conserva cristalino con la divina asis-tencia de la gracia y comprendido de su Amor y temor siguiendo la luz divina de tan amante Sentildeor Dios y ombre verdadero con que este ilustrado corason ni se altera ni se mueve por los disfrasses dorados que ase el mundo y sus moradores mayormente con falssas amistades aunque con ellos muestre buena intension Con la misma grasia y luz de Dios conose el buen corason estos disfrasses que le ase el mundo y se retira de todo con espiritu y valor esto sin la menor alterasion sino que en suma paz se retira a buscar a Dios dentro de su mismo corason

173ESPANtildeOLAS DE ULTRAMAR EN LA HISTORIA Y EN LA LITERATURA

y se abrasa con su pura verdad en la qual se le descubren mil interio-res secretos tan solidos puros y verdaderos que la misma Alma queda abismada y de puro grandes no los puede bien comprender ni esplicar pero estos mismos secretos divinos le sirven de espuelas para no solo correr sino bolar con pies de plumas en seguimiento de su bien ama-do Jesus y como este soberano Sentildeor es tan amante de sus espossas las Almas luego que la ve bolar con pies de plumas la sale al encuen-tro en despoblado campo que se deve de llamar Campo de Amor de Dios y el mismo Sentildeor se viene a las manos por ser Dios que nos ama con Amor infinito de Padre benigno y amoroso con que asiendose en contra deso este divino enamorado en lo interyor de el Alma que le busca con ansias de servirle y amarle y en aquella soledad traban una conversasion amorosa y sensilla como la pluma simple de quien esto escrive

Divino enquentroDios y el Alma en la soledad

O Soberano Principe de la paz dise el Alma tus perfumes me traen a ti bolando porque alla en el mundo y sus valedores me pretendian engantildear y entretenerme con pegaminossas amistades que facilmen-te me pudieran envenenar y matarme apartandome de ti Mi dulse Jesus amable mi Redentor Soberano que con tantas ansias me sales al enquentro como siervo [ciervo] erido de mis Amores los quales tu Amor me ofrese para que con tu mismo Amor te ame y te sirva en paz sin perturbarme ni contristarme ni cansarme de padeser pasando si se ofrese por escarchas nieves espinas ni abrojos ni por otros diverssos trabajos ni piedras de contradision que tu me puedes permitir pues por mas que el mar se levante con sus ferosses olas contra mi ni piedras se me tiren al rostro en todo Sentildeor me quieres con serenidad pasifica sin la menor perturbasion Todo Sentildeor quieres que lo tome con Serenidad de espiritu y asi vengo a ti bolando para que mejor me ensentildees a vivir segun las leyes de tu noble condision que me son muy agradables por mas que el mundo me las despresie por segir sus vanidades y torsidas intensiones con apariensias de bien y con este engantildeo y bien me quie-ro mas a mi que no a mi proximo veo que segun mi pareser se pierden muchas Almas y tambien de aquellos que se depresian y pasan por muy espirituales Con que me paresen pocos los que llegan a padeser con desnudes151 de espiritu por tu purisimo Amor y me parese essas se quedan muy atrasadas en la virtud por el peligro de bolver muy atras el paso de modo que se pueden despentildear y pereser en su misma desgra-sia ya por soberbia o por otras enfermedades que se les pega al corason y asi lo pasan como siegos ignorantes sin advertir en sus peligros

151 La letra en cursiva es miacutea

174 JUAN FRANCISCO MAURA

este aquerdo Sentildeor y otros que tu verdad me ensentildea me ase venir uyendo de las paredes del mundo y me vengo a ti Dios mio bolando con las dos Alas del Amor y temor que tu mismo Amor me ofrese tan de gracia y tan de grado que no se duentildeo mio con que lo responder a tan soberano beneficio y finesa de tus entrantildeas de Amorvengo Sentildeor y esposo mio unicamente a descansar en ti pues los peli-gros del camino me an puesto en mucho sobresalto temiendo el per-derte y sin ti perderme para siempre por una eternidad sin fin pues deseo amado mio ganarme ganandote a ti y vivir en ti aora en vida y despues eternamente y estos cuidados me traen fatigada molida y cansada y no podre tener alivio y descanso sino viendome entre tus brassos aunque sea estando en cruz pues ese es el fin de mis deseos vivir y morir en ti ablame mi cordero manso y ensentildeame a que ver-daderamente te ame como fiel esposa ea mi caro amigo dame la ma-no pues sabes Amor mio que en mi no ay mano sin tu misma mano y asi mi Dios y Sentildeor mi Principe Soberano con umilde rendimiento y deseos de alcansarte te suplico me des la mano y me consueles en estos mis trabajos Deseo Sentildeor vivir en paz y los malos amores de mi Naturaleza flaca no me dejan detentar y no quieren por mi desgrasia atropellar con las leyes de tu Amor ni quisiera perturbar mi corason quando me veo con un torvellino de olas y contratiempos que a menu-do me suelen sercar pero si tu Sentildeor me das la mano nada temo sino que me aseguro y vivire en paz sin que me fatiguen los contratiempos pues mi mano en la tuya y mi espiritu en el tuyo por mas borrascas que me envistan no seran bastantes para rendir mi voluntad a la suya bien si para pronunsiar un fiat que resuene bien atras en tus oidos y que en medio de mis fatigas me ponga a cantar tus divinas misericor-dias hea Sentildeor ya pretendo serrar mis labios por no desir mas bove-rias y deseo Sentildeor oir tus palabras de vida eterna abla Sentildeor que tu sierva oye con atension y cuydado mira mi Dios que se me ase tarde y espero con prisa deseando saborearme y aprovecharme de los ecos de tu Santa dotrina pues todas tus palabras saben a eterna vida callen pues mis sentidos y potensias y todo se ponga en paz pues mi dulse y soberano Sentildeor no se escusara de ablar me aun que en mudo silensio hea mi gran Prinsipe de la paz ablame que tus puros amores me traen perdida por estos asperos montes y mis cortos pasos no te pueden dar alcanse mirame mi Dios a tus pies postrada como un vil gusano y me-nor ormiga de la tierraabla Jesus y dise a su esposa el Alma querida esposa mia que me pides y por que te muestras tan fatigada y mal sufrida no vives como corde-rita del campo buscando de mis pechos el sustancial pasto mi Amor no te sustenta y mi grasia te promete eterna vida pues dime amada de que te fatigas y te muestras mal sufrida mira que te amo con Amor de padre y con Amor de esposo el mas fino y puro enamorado que no tan solo me presio de darte mi mano sino tambien todo mi cuerpo y

175ESPANtildeOLAS DE ULTRAMAR EN LA HISTORIA Y EN LA LITERATURA

sangre para que con mi pan de vida te sustentes y te regales a tus an-churas y que con mi propio espiritu vivas en paz como tu lo deseas y que mis amores sean unico alivio en tus trabajos en esta mortal vida pues si esto es asi y sabes que muero por darte vida dime esposa mia de que te fatigas Dame querida tus brassos y dime si me amas como yo te amoResponde el Alma152 Tu mi Dios sabes si yo te amo pues de mi solo se que mis deseos y ansias buelan a ti mas no alcanso a saber si te amo como tu de-seas ser amado y como desconfio tanto de mi y de mis prosederes falssos temo Dios mio perderme y perderte y asi Sentildeor pues no desechas mis Amores y te muestras tan fino en amarme te pido me ensentildees a vivir segun las leyes de tu pura verdad y fina condisionhija mia dise Dios la prueva de un verdadero Amor consiste en sufrir callar y padeser por mi unico Amor y en todo seguir mis pasos sin ja-mas retroseder por mas fragoso que se muestre el camino pues nunca seran tantas las espinas las escarchas ni las nieves ni los vientos bo-rrascosos que te se ofrescan pasar por mi Amor como los que mi tierno y desinteresado Amor paso por ti y siempre con mis pies descalssos y asi hija y esposa mia muestrate costante en seguir lo perfecto de mis passos pues mi braso fuerte sera en ti y peleara por ti y te sera el todo en tus nesesidades y mi Amor te convertira en dulse y suave lo amargo y molesto a la condision de la carrne

Responde el Alma

O mi enamorado Jesus O mi dulse y tierno amanteO alegria de los sielos O dulse Jesus amable

(Toda Sentildeor me derrito toda Sentildeor me desagoy quiero vivir por ti ea sentildeor abrasadme) [Tachado en el original]

Toda Sentildeor me derrito toda Sentildeor me desagoy quiero morir por vos ea Sentildeor que ya acabo

Ya tus amores me llaman ya tus perfumes me traencon suspiros y agonias Sentildeor asta que te alcanse

O mi Jesus amoroso no puedo mas dilatarmeya la pasiensia me falta dulse Jesus abrasadme

(No puedo vivir sin vos no puedo mas dilatarmeya la pasiensia me falta dulse) [Tachado en el original]

No puedo vivir sin vos mi dulse Jesus amablepues me teneis echisada siendo mi esposo y mi Padre

152 La aparicioacuten de una mayuacutescula al principio de una oracioacuten es algo totalmente arbitrario en este ma-nuscrito dada la libertad ortograacutefica de la autora Como se puede observar en la mayor parte de las veces no es el caso

176 JUAN FRANCISCO MAURA

Ay que me abraso Ay que me quemo del Amor deJesus nasareno como no tocan y tantildeen a fuego

Responde Jesus Hija mia tus simples vozes oygo y aunque resuenan bien a mis oidos pero te deseo mas mansa y pasifica en tus fervores ya sabes que no siempre as de vivir en mantillas ni a los pechos de tu Madre por que es rason que padescas con espiritu fuerte como mu-jer valerosa por que a una esposa del Rey soberano y prinsipe de la paz no le estan bien chiquerias ni fervores de nintildea malcriada y ya es ora que la destete su Madre la Naturaleza y que empesando su nueva vida camine con el favor de mi grasia sigiendo mis passos de eterna vida esto con sus pies descalssos segun mis leyes de Amor puro y desinteresado lo tienen ordenado153 y vivir en paz como lo deje en-cargado a mis apostoles Santos repitiendoles varias vezes Vivir en pas y caridad esto es un vivir en Dios y Dios en el Alma y asi hija mia el Alma que vive en paz vive en mi Como mis cortesanos en el cielo y pues me pides que te ensentildee a vivir segun las leyes de mi condision Repito el desir que te debes mostrar sufrida en todo tiempo y estado sin permitir en tu corason que ni aun los fervores se adelanten con estremos ni ademanes sino atiende y aprende de mi purisima Madre pues siempre la veras si bien lo consideras que mientras vivio en el mundo en todos sus trabajos se mostro firme fuerte costante como piedra diamante Pues mirandome nintildeo entre sus brasos desnudo en el pesebre desnudo y crusificado en los brassos de una cruz En estos y otros passos no se mudo su rostro sino que en suma serenidad y pasifico corason toda se sacrificaba enteramente en los brassos de mi Amor y rendido su corason y voluntad en la de mi eterno Padre por ejemplo te la doy y deseo que aprendas de sus nobles calidades pues te aseguro carisima que las leyes de mi condision y pura verdad todo lo allaras enserrado en el corason de mi purisima Madre sedle fiel y descansaras en paz

+

Quartillas a un alma que padese soledad interior

1Un Alma afligida y tristese ve en un campo desiertay en el su esposo la tieneAtormentada y sedienta

153 Es a traveacutes de estas liacuteneas lo que hace suponer que la autora de este diaacutelogo amoroso entre el Alma y Je-suacutes es novicia esto es laquoque estaacute empesando su nueva vidaraquo En las mismas liacuteneas una vez maacutes se hace alusioacuten al laquodesteteraquo de su vida civil laquoa una esposa del Rey soberano y principe de la paz no le estan bien chiquerias ni fervores de nintildea malcriada y ya es ora que la destete su Madre la naturalesaraquo (fol 5)

177ESPANtildeOLAS DE ULTRAMAR EN LA HISTORIA Y EN LA LITERATURA

2Pendiente se ve en el AyreSolo un hilo la sustentasin tocar el pie en el sueloporque del no tome tierra

3Mirandola esta yto a ytoaquel sol que la atraviesay la enviste con sus rayosmas ella no pestantildeea

4Como sigarra padese y como a tal se atormentabatiendo sus mismas Alasy el corason se atraviesa

5Con penas sustos temoresquando se mira assi mesmasin tener valor en nadaporque es la misma flaquesa

6Pero el Amor de su esposotoda su atension le llevay la pone en un abismopero cubierto en tiniebla

7Desea dar algun bueloy subir con ligeresapero se mira travadacon una fuerte cadena

8Clama suspira y padeseMas del todo se sujetaRindiendo su voluntadA la divina clemencia

9Los enemigos del AlmaCruelmente le asen guerray ella aunque firme y constantelos reselos la atormentan

178 JUAN FRANCISCO MAURA

10de todos modos padeseaunque gosa la asistensiadel divino esposo amadoque en su interior se recrea

11Solo de verla penary con verla tan serenadise resibe mil gustosde su sigarra pequentildea

12Le sabe el mundo a mil yelesy su trato le atormentaviendo en el mil falsedadesque todas saben a tierra

13Para poderse librardeja de correr y buelacon las Alas del Amory el mismo Amor se la lleva

Una vida dedicada a un amor divino un amor que le haraacute llenar un buen nuacutemero de cuartillas dedicadas a tan alta empresa Se desconoce si la vocacioacuten de Sor Nada con-tinuoacute con tanta intensidad el resto de sus diacuteas Ciertamente la vida en el covento no era faacutecil En algunos casos la experiencia era traumaacutetica incluso fatal para algunas de las adolescentes de la Ameacuterica Espantildeola Las reglas del claustro eran severas por varias razones Estas joacutevenes si no teniacutean el permiso de la superiora no podiacutean recibir visitas no podiacutean volver a sus casas su correspondencia era censuraba y no podiacutean salir del periacutemetro conventual Igualmente se levantaban antes del amanecer para oir misa tra-bajaban el resto del diacutea y lo maacutes interesante es que muchas veces esta vida era aceptada por muchas

Page 42: Tercera parte: Mujeres en la vida intelectual - …parnaseo.uv.es/Editorial/Maura/TerceraParte.pdf · La Biblia, por su parte, hace repetidas menciones de la mujer y sobre el comporta-

172 JUAN FRANCISCO MAURA

miacutesticos San Juan de la Cruz Esta tradicioacuten se extiende hasta finales del siglo XVII esto es hasta los finales del Barroco siendo un poco maacutes tardiacuteo en la Ameacuterica espantildeola Sin tener como propoacutesito discutir en el presente trabajo a queacute corriente miacutestica pertenece la obra de Sor Nada es necesario resaltar no obstante el hecho de que estaacute escrito por una mujer y ademaacutes de tierna edad El manuscrito 12959 Caja 26 termina con estas pa-labras laquo[T]odas estas boverias escrivi por entretenimiento siendo resien profesa en la religion Sor Nadaraquo Mas no por la juventud de su autora los escritos dejan de tener lo-gradas metaacuteforas imaacutegenes y siacutembolos sacados de la naturaleza La alegoriacutea de la unioacuten matrimonial poseeacute el fuego liacuterico de la maacutes apasionada de las relaciones amorosas vivi-ficada por perfumes flores insectos animales escarchas nieves o abrojos Por lo tanto aunque la narracioacuten destile cierta ingenuidad no carece por ello de un vocabulario rico con el sabor popular de la poesiacutea de los cancioneros y romances de tradicioacuten renacen-tista No ha sido otra mi intencioacuten que la de rescatar del olvido unos escritos en prosa y en verso llenos de frescura y espontaneidad que nos muestran la pasioacuten con que la joven novicia se laquoentrega en cuerpo y almaraquo a los menesteres de su profesioacuten guiada por un padre espiritual en esos primeros antildeos de formacioacuten Esta ha sido la razoacuten por la que presento a continuacioacuten el citado manuscrito en su totalidad

Sor Nada (Mss 1295928)

laquoEsplicacion sobre en que consiste la paz del AlmaraquolaquoQuartillas a un Alma que padece soledad interiorraquo

[7 hojas utiles en 4ordm letra del siglo XVII]

+

Esplicacion sobre en que consiste la paz del Alma

Pareseme segun mi rudo entender que la verdadera paz del Alma con-siste en una muy pura y buena consiencia en un corason liso y bien intensionado en una verdadera rectitud de espiritu en el qual el Alma procura bolar a Dios sin jamas detenerse a respetos umanos ni reparar en que me diran ni de que me censuraran sino me apresuro a seguir a unos entenderes y pareseres dorados en los quales pretende el mundo engantildear y ensuciar si se puede la puresa de un corason unicamente de Dios y de su Santa ley y se lo conserva cristalino con la divina asis-tencia de la gracia y comprendido de su Amor y temor siguiendo la luz divina de tan amante Sentildeor Dios y ombre verdadero con que este ilustrado corason ni se altera ni se mueve por los disfrasses dorados que ase el mundo y sus moradores mayormente con falssas amistades aunque con ellos muestre buena intension Con la misma grasia y luz de Dios conose el buen corason estos disfrasses que le ase el mundo y se retira de todo con espiritu y valor esto sin la menor alterasion sino que en suma paz se retira a buscar a Dios dentro de su mismo corason

173ESPANtildeOLAS DE ULTRAMAR EN LA HISTORIA Y EN LA LITERATURA

y se abrasa con su pura verdad en la qual se le descubren mil interio-res secretos tan solidos puros y verdaderos que la misma Alma queda abismada y de puro grandes no los puede bien comprender ni esplicar pero estos mismos secretos divinos le sirven de espuelas para no solo correr sino bolar con pies de plumas en seguimiento de su bien ama-do Jesus y como este soberano Sentildeor es tan amante de sus espossas las Almas luego que la ve bolar con pies de plumas la sale al encuen-tro en despoblado campo que se deve de llamar Campo de Amor de Dios y el mismo Sentildeor se viene a las manos por ser Dios que nos ama con Amor infinito de Padre benigno y amoroso con que asiendose en contra deso este divino enamorado en lo interyor de el Alma que le busca con ansias de servirle y amarle y en aquella soledad traban una conversasion amorosa y sensilla como la pluma simple de quien esto escrive

Divino enquentroDios y el Alma en la soledad

O Soberano Principe de la paz dise el Alma tus perfumes me traen a ti bolando porque alla en el mundo y sus valedores me pretendian engantildear y entretenerme con pegaminossas amistades que facilmen-te me pudieran envenenar y matarme apartandome de ti Mi dulse Jesus amable mi Redentor Soberano que con tantas ansias me sales al enquentro como siervo [ciervo] erido de mis Amores los quales tu Amor me ofrese para que con tu mismo Amor te ame y te sirva en paz sin perturbarme ni contristarme ni cansarme de padeser pasando si se ofrese por escarchas nieves espinas ni abrojos ni por otros diverssos trabajos ni piedras de contradision que tu me puedes permitir pues por mas que el mar se levante con sus ferosses olas contra mi ni piedras se me tiren al rostro en todo Sentildeor me quieres con serenidad pasifica sin la menor perturbasion Todo Sentildeor quieres que lo tome con Serenidad de espiritu y asi vengo a ti bolando para que mejor me ensentildees a vivir segun las leyes de tu noble condision que me son muy agradables por mas que el mundo me las despresie por segir sus vanidades y torsidas intensiones con apariensias de bien y con este engantildeo y bien me quie-ro mas a mi que no a mi proximo veo que segun mi pareser se pierden muchas Almas y tambien de aquellos que se depresian y pasan por muy espirituales Con que me paresen pocos los que llegan a padeser con desnudes151 de espiritu por tu purisimo Amor y me parese essas se quedan muy atrasadas en la virtud por el peligro de bolver muy atras el paso de modo que se pueden despentildear y pereser en su misma desgra-sia ya por soberbia o por otras enfermedades que se les pega al corason y asi lo pasan como siegos ignorantes sin advertir en sus peligros

151 La letra en cursiva es miacutea

174 JUAN FRANCISCO MAURA

este aquerdo Sentildeor y otros que tu verdad me ensentildea me ase venir uyendo de las paredes del mundo y me vengo a ti Dios mio bolando con las dos Alas del Amor y temor que tu mismo Amor me ofrese tan de gracia y tan de grado que no se duentildeo mio con que lo responder a tan soberano beneficio y finesa de tus entrantildeas de Amorvengo Sentildeor y esposo mio unicamente a descansar en ti pues los peli-gros del camino me an puesto en mucho sobresalto temiendo el per-derte y sin ti perderme para siempre por una eternidad sin fin pues deseo amado mio ganarme ganandote a ti y vivir en ti aora en vida y despues eternamente y estos cuidados me traen fatigada molida y cansada y no podre tener alivio y descanso sino viendome entre tus brassos aunque sea estando en cruz pues ese es el fin de mis deseos vivir y morir en ti ablame mi cordero manso y ensentildeame a que ver-daderamente te ame como fiel esposa ea mi caro amigo dame la ma-no pues sabes Amor mio que en mi no ay mano sin tu misma mano y asi mi Dios y Sentildeor mi Principe Soberano con umilde rendimiento y deseos de alcansarte te suplico me des la mano y me consueles en estos mis trabajos Deseo Sentildeor vivir en paz y los malos amores de mi Naturaleza flaca no me dejan detentar y no quieren por mi desgrasia atropellar con las leyes de tu Amor ni quisiera perturbar mi corason quando me veo con un torvellino de olas y contratiempos que a menu-do me suelen sercar pero si tu Sentildeor me das la mano nada temo sino que me aseguro y vivire en paz sin que me fatiguen los contratiempos pues mi mano en la tuya y mi espiritu en el tuyo por mas borrascas que me envistan no seran bastantes para rendir mi voluntad a la suya bien si para pronunsiar un fiat que resuene bien atras en tus oidos y que en medio de mis fatigas me ponga a cantar tus divinas misericor-dias hea Sentildeor ya pretendo serrar mis labios por no desir mas bove-rias y deseo Sentildeor oir tus palabras de vida eterna abla Sentildeor que tu sierva oye con atension y cuydado mira mi Dios que se me ase tarde y espero con prisa deseando saborearme y aprovecharme de los ecos de tu Santa dotrina pues todas tus palabras saben a eterna vida callen pues mis sentidos y potensias y todo se ponga en paz pues mi dulse y soberano Sentildeor no se escusara de ablar me aun que en mudo silensio hea mi gran Prinsipe de la paz ablame que tus puros amores me traen perdida por estos asperos montes y mis cortos pasos no te pueden dar alcanse mirame mi Dios a tus pies postrada como un vil gusano y me-nor ormiga de la tierraabla Jesus y dise a su esposa el Alma querida esposa mia que me pides y por que te muestras tan fatigada y mal sufrida no vives como corde-rita del campo buscando de mis pechos el sustancial pasto mi Amor no te sustenta y mi grasia te promete eterna vida pues dime amada de que te fatigas y te muestras mal sufrida mira que te amo con Amor de padre y con Amor de esposo el mas fino y puro enamorado que no tan solo me presio de darte mi mano sino tambien todo mi cuerpo y

175ESPANtildeOLAS DE ULTRAMAR EN LA HISTORIA Y EN LA LITERATURA

sangre para que con mi pan de vida te sustentes y te regales a tus an-churas y que con mi propio espiritu vivas en paz como tu lo deseas y que mis amores sean unico alivio en tus trabajos en esta mortal vida pues si esto es asi y sabes que muero por darte vida dime esposa mia de que te fatigas Dame querida tus brassos y dime si me amas como yo te amoResponde el Alma152 Tu mi Dios sabes si yo te amo pues de mi solo se que mis deseos y ansias buelan a ti mas no alcanso a saber si te amo como tu de-seas ser amado y como desconfio tanto de mi y de mis prosederes falssos temo Dios mio perderme y perderte y asi Sentildeor pues no desechas mis Amores y te muestras tan fino en amarme te pido me ensentildees a vivir segun las leyes de tu pura verdad y fina condisionhija mia dise Dios la prueva de un verdadero Amor consiste en sufrir callar y padeser por mi unico Amor y en todo seguir mis pasos sin ja-mas retroseder por mas fragoso que se muestre el camino pues nunca seran tantas las espinas las escarchas ni las nieves ni los vientos bo-rrascosos que te se ofrescan pasar por mi Amor como los que mi tierno y desinteresado Amor paso por ti y siempre con mis pies descalssos y asi hija y esposa mia muestrate costante en seguir lo perfecto de mis passos pues mi braso fuerte sera en ti y peleara por ti y te sera el todo en tus nesesidades y mi Amor te convertira en dulse y suave lo amargo y molesto a la condision de la carrne

Responde el Alma

O mi enamorado Jesus O mi dulse y tierno amanteO alegria de los sielos O dulse Jesus amable

(Toda Sentildeor me derrito toda Sentildeor me desagoy quiero vivir por ti ea sentildeor abrasadme) [Tachado en el original]

Toda Sentildeor me derrito toda Sentildeor me desagoy quiero morir por vos ea Sentildeor que ya acabo

Ya tus amores me llaman ya tus perfumes me traencon suspiros y agonias Sentildeor asta que te alcanse

O mi Jesus amoroso no puedo mas dilatarmeya la pasiensia me falta dulse Jesus abrasadme

(No puedo vivir sin vos no puedo mas dilatarmeya la pasiensia me falta dulse) [Tachado en el original]

No puedo vivir sin vos mi dulse Jesus amablepues me teneis echisada siendo mi esposo y mi Padre

152 La aparicioacuten de una mayuacutescula al principio de una oracioacuten es algo totalmente arbitrario en este ma-nuscrito dada la libertad ortograacutefica de la autora Como se puede observar en la mayor parte de las veces no es el caso

176 JUAN FRANCISCO MAURA

Ay que me abraso Ay que me quemo del Amor deJesus nasareno como no tocan y tantildeen a fuego

Responde Jesus Hija mia tus simples vozes oygo y aunque resuenan bien a mis oidos pero te deseo mas mansa y pasifica en tus fervores ya sabes que no siempre as de vivir en mantillas ni a los pechos de tu Madre por que es rason que padescas con espiritu fuerte como mu-jer valerosa por que a una esposa del Rey soberano y prinsipe de la paz no le estan bien chiquerias ni fervores de nintildea malcriada y ya es ora que la destete su Madre la Naturaleza y que empesando su nueva vida camine con el favor de mi grasia sigiendo mis passos de eterna vida esto con sus pies descalssos segun mis leyes de Amor puro y desinteresado lo tienen ordenado153 y vivir en paz como lo deje en-cargado a mis apostoles Santos repitiendoles varias vezes Vivir en pas y caridad esto es un vivir en Dios y Dios en el Alma y asi hija mia el Alma que vive en paz vive en mi Como mis cortesanos en el cielo y pues me pides que te ensentildee a vivir segun las leyes de mi condision Repito el desir que te debes mostrar sufrida en todo tiempo y estado sin permitir en tu corason que ni aun los fervores se adelanten con estremos ni ademanes sino atiende y aprende de mi purisima Madre pues siempre la veras si bien lo consideras que mientras vivio en el mundo en todos sus trabajos se mostro firme fuerte costante como piedra diamante Pues mirandome nintildeo entre sus brasos desnudo en el pesebre desnudo y crusificado en los brassos de una cruz En estos y otros passos no se mudo su rostro sino que en suma serenidad y pasifico corason toda se sacrificaba enteramente en los brassos de mi Amor y rendido su corason y voluntad en la de mi eterno Padre por ejemplo te la doy y deseo que aprendas de sus nobles calidades pues te aseguro carisima que las leyes de mi condision y pura verdad todo lo allaras enserrado en el corason de mi purisima Madre sedle fiel y descansaras en paz

+

Quartillas a un alma que padese soledad interior

1Un Alma afligida y tristese ve en un campo desiertay en el su esposo la tieneAtormentada y sedienta

153 Es a traveacutes de estas liacuteneas lo que hace suponer que la autora de este diaacutelogo amoroso entre el Alma y Je-suacutes es novicia esto es laquoque estaacute empesando su nueva vidaraquo En las mismas liacuteneas una vez maacutes se hace alusioacuten al laquodesteteraquo de su vida civil laquoa una esposa del Rey soberano y principe de la paz no le estan bien chiquerias ni fervores de nintildea malcriada y ya es ora que la destete su Madre la naturalesaraquo (fol 5)

177ESPANtildeOLAS DE ULTRAMAR EN LA HISTORIA Y EN LA LITERATURA

2Pendiente se ve en el AyreSolo un hilo la sustentasin tocar el pie en el sueloporque del no tome tierra

3Mirandola esta yto a ytoaquel sol que la atraviesay la enviste con sus rayosmas ella no pestantildeea

4Como sigarra padese y como a tal se atormentabatiendo sus mismas Alasy el corason se atraviesa

5Con penas sustos temoresquando se mira assi mesmasin tener valor en nadaporque es la misma flaquesa

6Pero el Amor de su esposotoda su atension le llevay la pone en un abismopero cubierto en tiniebla

7Desea dar algun bueloy subir con ligeresapero se mira travadacon una fuerte cadena

8Clama suspira y padeseMas del todo se sujetaRindiendo su voluntadA la divina clemencia

9Los enemigos del AlmaCruelmente le asen guerray ella aunque firme y constantelos reselos la atormentan

178 JUAN FRANCISCO MAURA

10de todos modos padeseaunque gosa la asistensiadel divino esposo amadoque en su interior se recrea

11Solo de verla penary con verla tan serenadise resibe mil gustosde su sigarra pequentildea

12Le sabe el mundo a mil yelesy su trato le atormentaviendo en el mil falsedadesque todas saben a tierra

13Para poderse librardeja de correr y buelacon las Alas del Amory el mismo Amor se la lleva

Una vida dedicada a un amor divino un amor que le haraacute llenar un buen nuacutemero de cuartillas dedicadas a tan alta empresa Se desconoce si la vocacioacuten de Sor Nada con-tinuoacute con tanta intensidad el resto de sus diacuteas Ciertamente la vida en el covento no era faacutecil En algunos casos la experiencia era traumaacutetica incluso fatal para algunas de las adolescentes de la Ameacuterica Espantildeola Las reglas del claustro eran severas por varias razones Estas joacutevenes si no teniacutean el permiso de la superiora no podiacutean recibir visitas no podiacutean volver a sus casas su correspondencia era censuraba y no podiacutean salir del periacutemetro conventual Igualmente se levantaban antes del amanecer para oir misa tra-bajaban el resto del diacutea y lo maacutes interesante es que muchas veces esta vida era aceptada por muchas

Page 43: Tercera parte: Mujeres en la vida intelectual - …parnaseo.uv.es/Editorial/Maura/TerceraParte.pdf · La Biblia, por su parte, hace repetidas menciones de la mujer y sobre el comporta-

173ESPANtildeOLAS DE ULTRAMAR EN LA HISTORIA Y EN LA LITERATURA

y se abrasa con su pura verdad en la qual se le descubren mil interio-res secretos tan solidos puros y verdaderos que la misma Alma queda abismada y de puro grandes no los puede bien comprender ni esplicar pero estos mismos secretos divinos le sirven de espuelas para no solo correr sino bolar con pies de plumas en seguimiento de su bien ama-do Jesus y como este soberano Sentildeor es tan amante de sus espossas las Almas luego que la ve bolar con pies de plumas la sale al encuen-tro en despoblado campo que se deve de llamar Campo de Amor de Dios y el mismo Sentildeor se viene a las manos por ser Dios que nos ama con Amor infinito de Padre benigno y amoroso con que asiendose en contra deso este divino enamorado en lo interyor de el Alma que le busca con ansias de servirle y amarle y en aquella soledad traban una conversasion amorosa y sensilla como la pluma simple de quien esto escrive

Divino enquentroDios y el Alma en la soledad

O Soberano Principe de la paz dise el Alma tus perfumes me traen a ti bolando porque alla en el mundo y sus valedores me pretendian engantildear y entretenerme con pegaminossas amistades que facilmen-te me pudieran envenenar y matarme apartandome de ti Mi dulse Jesus amable mi Redentor Soberano que con tantas ansias me sales al enquentro como siervo [ciervo] erido de mis Amores los quales tu Amor me ofrese para que con tu mismo Amor te ame y te sirva en paz sin perturbarme ni contristarme ni cansarme de padeser pasando si se ofrese por escarchas nieves espinas ni abrojos ni por otros diverssos trabajos ni piedras de contradision que tu me puedes permitir pues por mas que el mar se levante con sus ferosses olas contra mi ni piedras se me tiren al rostro en todo Sentildeor me quieres con serenidad pasifica sin la menor perturbasion Todo Sentildeor quieres que lo tome con Serenidad de espiritu y asi vengo a ti bolando para que mejor me ensentildees a vivir segun las leyes de tu noble condision que me son muy agradables por mas que el mundo me las despresie por segir sus vanidades y torsidas intensiones con apariensias de bien y con este engantildeo y bien me quie-ro mas a mi que no a mi proximo veo que segun mi pareser se pierden muchas Almas y tambien de aquellos que se depresian y pasan por muy espirituales Con que me paresen pocos los que llegan a padeser con desnudes151 de espiritu por tu purisimo Amor y me parese essas se quedan muy atrasadas en la virtud por el peligro de bolver muy atras el paso de modo que se pueden despentildear y pereser en su misma desgra-sia ya por soberbia o por otras enfermedades que se les pega al corason y asi lo pasan como siegos ignorantes sin advertir en sus peligros

151 La letra en cursiva es miacutea

174 JUAN FRANCISCO MAURA

este aquerdo Sentildeor y otros que tu verdad me ensentildea me ase venir uyendo de las paredes del mundo y me vengo a ti Dios mio bolando con las dos Alas del Amor y temor que tu mismo Amor me ofrese tan de gracia y tan de grado que no se duentildeo mio con que lo responder a tan soberano beneficio y finesa de tus entrantildeas de Amorvengo Sentildeor y esposo mio unicamente a descansar en ti pues los peli-gros del camino me an puesto en mucho sobresalto temiendo el per-derte y sin ti perderme para siempre por una eternidad sin fin pues deseo amado mio ganarme ganandote a ti y vivir en ti aora en vida y despues eternamente y estos cuidados me traen fatigada molida y cansada y no podre tener alivio y descanso sino viendome entre tus brassos aunque sea estando en cruz pues ese es el fin de mis deseos vivir y morir en ti ablame mi cordero manso y ensentildeame a que ver-daderamente te ame como fiel esposa ea mi caro amigo dame la ma-no pues sabes Amor mio que en mi no ay mano sin tu misma mano y asi mi Dios y Sentildeor mi Principe Soberano con umilde rendimiento y deseos de alcansarte te suplico me des la mano y me consueles en estos mis trabajos Deseo Sentildeor vivir en paz y los malos amores de mi Naturaleza flaca no me dejan detentar y no quieren por mi desgrasia atropellar con las leyes de tu Amor ni quisiera perturbar mi corason quando me veo con un torvellino de olas y contratiempos que a menu-do me suelen sercar pero si tu Sentildeor me das la mano nada temo sino que me aseguro y vivire en paz sin que me fatiguen los contratiempos pues mi mano en la tuya y mi espiritu en el tuyo por mas borrascas que me envistan no seran bastantes para rendir mi voluntad a la suya bien si para pronunsiar un fiat que resuene bien atras en tus oidos y que en medio de mis fatigas me ponga a cantar tus divinas misericor-dias hea Sentildeor ya pretendo serrar mis labios por no desir mas bove-rias y deseo Sentildeor oir tus palabras de vida eterna abla Sentildeor que tu sierva oye con atension y cuydado mira mi Dios que se me ase tarde y espero con prisa deseando saborearme y aprovecharme de los ecos de tu Santa dotrina pues todas tus palabras saben a eterna vida callen pues mis sentidos y potensias y todo se ponga en paz pues mi dulse y soberano Sentildeor no se escusara de ablar me aun que en mudo silensio hea mi gran Prinsipe de la paz ablame que tus puros amores me traen perdida por estos asperos montes y mis cortos pasos no te pueden dar alcanse mirame mi Dios a tus pies postrada como un vil gusano y me-nor ormiga de la tierraabla Jesus y dise a su esposa el Alma querida esposa mia que me pides y por que te muestras tan fatigada y mal sufrida no vives como corde-rita del campo buscando de mis pechos el sustancial pasto mi Amor no te sustenta y mi grasia te promete eterna vida pues dime amada de que te fatigas y te muestras mal sufrida mira que te amo con Amor de padre y con Amor de esposo el mas fino y puro enamorado que no tan solo me presio de darte mi mano sino tambien todo mi cuerpo y

175ESPANtildeOLAS DE ULTRAMAR EN LA HISTORIA Y EN LA LITERATURA

sangre para que con mi pan de vida te sustentes y te regales a tus an-churas y que con mi propio espiritu vivas en paz como tu lo deseas y que mis amores sean unico alivio en tus trabajos en esta mortal vida pues si esto es asi y sabes que muero por darte vida dime esposa mia de que te fatigas Dame querida tus brassos y dime si me amas como yo te amoResponde el Alma152 Tu mi Dios sabes si yo te amo pues de mi solo se que mis deseos y ansias buelan a ti mas no alcanso a saber si te amo como tu de-seas ser amado y como desconfio tanto de mi y de mis prosederes falssos temo Dios mio perderme y perderte y asi Sentildeor pues no desechas mis Amores y te muestras tan fino en amarme te pido me ensentildees a vivir segun las leyes de tu pura verdad y fina condisionhija mia dise Dios la prueva de un verdadero Amor consiste en sufrir callar y padeser por mi unico Amor y en todo seguir mis pasos sin ja-mas retroseder por mas fragoso que se muestre el camino pues nunca seran tantas las espinas las escarchas ni las nieves ni los vientos bo-rrascosos que te se ofrescan pasar por mi Amor como los que mi tierno y desinteresado Amor paso por ti y siempre con mis pies descalssos y asi hija y esposa mia muestrate costante en seguir lo perfecto de mis passos pues mi braso fuerte sera en ti y peleara por ti y te sera el todo en tus nesesidades y mi Amor te convertira en dulse y suave lo amargo y molesto a la condision de la carrne

Responde el Alma

O mi enamorado Jesus O mi dulse y tierno amanteO alegria de los sielos O dulse Jesus amable

(Toda Sentildeor me derrito toda Sentildeor me desagoy quiero vivir por ti ea sentildeor abrasadme) [Tachado en el original]

Toda Sentildeor me derrito toda Sentildeor me desagoy quiero morir por vos ea Sentildeor que ya acabo

Ya tus amores me llaman ya tus perfumes me traencon suspiros y agonias Sentildeor asta que te alcanse

O mi Jesus amoroso no puedo mas dilatarmeya la pasiensia me falta dulse Jesus abrasadme

(No puedo vivir sin vos no puedo mas dilatarmeya la pasiensia me falta dulse) [Tachado en el original]

No puedo vivir sin vos mi dulse Jesus amablepues me teneis echisada siendo mi esposo y mi Padre

152 La aparicioacuten de una mayuacutescula al principio de una oracioacuten es algo totalmente arbitrario en este ma-nuscrito dada la libertad ortograacutefica de la autora Como se puede observar en la mayor parte de las veces no es el caso

176 JUAN FRANCISCO MAURA

Ay que me abraso Ay que me quemo del Amor deJesus nasareno como no tocan y tantildeen a fuego

Responde Jesus Hija mia tus simples vozes oygo y aunque resuenan bien a mis oidos pero te deseo mas mansa y pasifica en tus fervores ya sabes que no siempre as de vivir en mantillas ni a los pechos de tu Madre por que es rason que padescas con espiritu fuerte como mu-jer valerosa por que a una esposa del Rey soberano y prinsipe de la paz no le estan bien chiquerias ni fervores de nintildea malcriada y ya es ora que la destete su Madre la Naturaleza y que empesando su nueva vida camine con el favor de mi grasia sigiendo mis passos de eterna vida esto con sus pies descalssos segun mis leyes de Amor puro y desinteresado lo tienen ordenado153 y vivir en paz como lo deje en-cargado a mis apostoles Santos repitiendoles varias vezes Vivir en pas y caridad esto es un vivir en Dios y Dios en el Alma y asi hija mia el Alma que vive en paz vive en mi Como mis cortesanos en el cielo y pues me pides que te ensentildee a vivir segun las leyes de mi condision Repito el desir que te debes mostrar sufrida en todo tiempo y estado sin permitir en tu corason que ni aun los fervores se adelanten con estremos ni ademanes sino atiende y aprende de mi purisima Madre pues siempre la veras si bien lo consideras que mientras vivio en el mundo en todos sus trabajos se mostro firme fuerte costante como piedra diamante Pues mirandome nintildeo entre sus brasos desnudo en el pesebre desnudo y crusificado en los brassos de una cruz En estos y otros passos no se mudo su rostro sino que en suma serenidad y pasifico corason toda se sacrificaba enteramente en los brassos de mi Amor y rendido su corason y voluntad en la de mi eterno Padre por ejemplo te la doy y deseo que aprendas de sus nobles calidades pues te aseguro carisima que las leyes de mi condision y pura verdad todo lo allaras enserrado en el corason de mi purisima Madre sedle fiel y descansaras en paz

+

Quartillas a un alma que padese soledad interior

1Un Alma afligida y tristese ve en un campo desiertay en el su esposo la tieneAtormentada y sedienta

153 Es a traveacutes de estas liacuteneas lo que hace suponer que la autora de este diaacutelogo amoroso entre el Alma y Je-suacutes es novicia esto es laquoque estaacute empesando su nueva vidaraquo En las mismas liacuteneas una vez maacutes se hace alusioacuten al laquodesteteraquo de su vida civil laquoa una esposa del Rey soberano y principe de la paz no le estan bien chiquerias ni fervores de nintildea malcriada y ya es ora que la destete su Madre la naturalesaraquo (fol 5)

177ESPANtildeOLAS DE ULTRAMAR EN LA HISTORIA Y EN LA LITERATURA

2Pendiente se ve en el AyreSolo un hilo la sustentasin tocar el pie en el sueloporque del no tome tierra

3Mirandola esta yto a ytoaquel sol que la atraviesay la enviste con sus rayosmas ella no pestantildeea

4Como sigarra padese y como a tal se atormentabatiendo sus mismas Alasy el corason se atraviesa

5Con penas sustos temoresquando se mira assi mesmasin tener valor en nadaporque es la misma flaquesa

6Pero el Amor de su esposotoda su atension le llevay la pone en un abismopero cubierto en tiniebla

7Desea dar algun bueloy subir con ligeresapero se mira travadacon una fuerte cadena

8Clama suspira y padeseMas del todo se sujetaRindiendo su voluntadA la divina clemencia

9Los enemigos del AlmaCruelmente le asen guerray ella aunque firme y constantelos reselos la atormentan

178 JUAN FRANCISCO MAURA

10de todos modos padeseaunque gosa la asistensiadel divino esposo amadoque en su interior se recrea

11Solo de verla penary con verla tan serenadise resibe mil gustosde su sigarra pequentildea

12Le sabe el mundo a mil yelesy su trato le atormentaviendo en el mil falsedadesque todas saben a tierra

13Para poderse librardeja de correr y buelacon las Alas del Amory el mismo Amor se la lleva

Una vida dedicada a un amor divino un amor que le haraacute llenar un buen nuacutemero de cuartillas dedicadas a tan alta empresa Se desconoce si la vocacioacuten de Sor Nada con-tinuoacute con tanta intensidad el resto de sus diacuteas Ciertamente la vida en el covento no era faacutecil En algunos casos la experiencia era traumaacutetica incluso fatal para algunas de las adolescentes de la Ameacuterica Espantildeola Las reglas del claustro eran severas por varias razones Estas joacutevenes si no teniacutean el permiso de la superiora no podiacutean recibir visitas no podiacutean volver a sus casas su correspondencia era censuraba y no podiacutean salir del periacutemetro conventual Igualmente se levantaban antes del amanecer para oir misa tra-bajaban el resto del diacutea y lo maacutes interesante es que muchas veces esta vida era aceptada por muchas

Page 44: Tercera parte: Mujeres en la vida intelectual - …parnaseo.uv.es/Editorial/Maura/TerceraParte.pdf · La Biblia, por su parte, hace repetidas menciones de la mujer y sobre el comporta-

174 JUAN FRANCISCO MAURA

este aquerdo Sentildeor y otros que tu verdad me ensentildea me ase venir uyendo de las paredes del mundo y me vengo a ti Dios mio bolando con las dos Alas del Amor y temor que tu mismo Amor me ofrese tan de gracia y tan de grado que no se duentildeo mio con que lo responder a tan soberano beneficio y finesa de tus entrantildeas de Amorvengo Sentildeor y esposo mio unicamente a descansar en ti pues los peli-gros del camino me an puesto en mucho sobresalto temiendo el per-derte y sin ti perderme para siempre por una eternidad sin fin pues deseo amado mio ganarme ganandote a ti y vivir en ti aora en vida y despues eternamente y estos cuidados me traen fatigada molida y cansada y no podre tener alivio y descanso sino viendome entre tus brassos aunque sea estando en cruz pues ese es el fin de mis deseos vivir y morir en ti ablame mi cordero manso y ensentildeame a que ver-daderamente te ame como fiel esposa ea mi caro amigo dame la ma-no pues sabes Amor mio que en mi no ay mano sin tu misma mano y asi mi Dios y Sentildeor mi Principe Soberano con umilde rendimiento y deseos de alcansarte te suplico me des la mano y me consueles en estos mis trabajos Deseo Sentildeor vivir en paz y los malos amores de mi Naturaleza flaca no me dejan detentar y no quieren por mi desgrasia atropellar con las leyes de tu Amor ni quisiera perturbar mi corason quando me veo con un torvellino de olas y contratiempos que a menu-do me suelen sercar pero si tu Sentildeor me das la mano nada temo sino que me aseguro y vivire en paz sin que me fatiguen los contratiempos pues mi mano en la tuya y mi espiritu en el tuyo por mas borrascas que me envistan no seran bastantes para rendir mi voluntad a la suya bien si para pronunsiar un fiat que resuene bien atras en tus oidos y que en medio de mis fatigas me ponga a cantar tus divinas misericor-dias hea Sentildeor ya pretendo serrar mis labios por no desir mas bove-rias y deseo Sentildeor oir tus palabras de vida eterna abla Sentildeor que tu sierva oye con atension y cuydado mira mi Dios que se me ase tarde y espero con prisa deseando saborearme y aprovecharme de los ecos de tu Santa dotrina pues todas tus palabras saben a eterna vida callen pues mis sentidos y potensias y todo se ponga en paz pues mi dulse y soberano Sentildeor no se escusara de ablar me aun que en mudo silensio hea mi gran Prinsipe de la paz ablame que tus puros amores me traen perdida por estos asperos montes y mis cortos pasos no te pueden dar alcanse mirame mi Dios a tus pies postrada como un vil gusano y me-nor ormiga de la tierraabla Jesus y dise a su esposa el Alma querida esposa mia que me pides y por que te muestras tan fatigada y mal sufrida no vives como corde-rita del campo buscando de mis pechos el sustancial pasto mi Amor no te sustenta y mi grasia te promete eterna vida pues dime amada de que te fatigas y te muestras mal sufrida mira que te amo con Amor de padre y con Amor de esposo el mas fino y puro enamorado que no tan solo me presio de darte mi mano sino tambien todo mi cuerpo y

175ESPANtildeOLAS DE ULTRAMAR EN LA HISTORIA Y EN LA LITERATURA

sangre para que con mi pan de vida te sustentes y te regales a tus an-churas y que con mi propio espiritu vivas en paz como tu lo deseas y que mis amores sean unico alivio en tus trabajos en esta mortal vida pues si esto es asi y sabes que muero por darte vida dime esposa mia de que te fatigas Dame querida tus brassos y dime si me amas como yo te amoResponde el Alma152 Tu mi Dios sabes si yo te amo pues de mi solo se que mis deseos y ansias buelan a ti mas no alcanso a saber si te amo como tu de-seas ser amado y como desconfio tanto de mi y de mis prosederes falssos temo Dios mio perderme y perderte y asi Sentildeor pues no desechas mis Amores y te muestras tan fino en amarme te pido me ensentildees a vivir segun las leyes de tu pura verdad y fina condisionhija mia dise Dios la prueva de un verdadero Amor consiste en sufrir callar y padeser por mi unico Amor y en todo seguir mis pasos sin ja-mas retroseder por mas fragoso que se muestre el camino pues nunca seran tantas las espinas las escarchas ni las nieves ni los vientos bo-rrascosos que te se ofrescan pasar por mi Amor como los que mi tierno y desinteresado Amor paso por ti y siempre con mis pies descalssos y asi hija y esposa mia muestrate costante en seguir lo perfecto de mis passos pues mi braso fuerte sera en ti y peleara por ti y te sera el todo en tus nesesidades y mi Amor te convertira en dulse y suave lo amargo y molesto a la condision de la carrne

Responde el Alma

O mi enamorado Jesus O mi dulse y tierno amanteO alegria de los sielos O dulse Jesus amable

(Toda Sentildeor me derrito toda Sentildeor me desagoy quiero vivir por ti ea sentildeor abrasadme) [Tachado en el original]

Toda Sentildeor me derrito toda Sentildeor me desagoy quiero morir por vos ea Sentildeor que ya acabo

Ya tus amores me llaman ya tus perfumes me traencon suspiros y agonias Sentildeor asta que te alcanse

O mi Jesus amoroso no puedo mas dilatarmeya la pasiensia me falta dulse Jesus abrasadme

(No puedo vivir sin vos no puedo mas dilatarmeya la pasiensia me falta dulse) [Tachado en el original]

No puedo vivir sin vos mi dulse Jesus amablepues me teneis echisada siendo mi esposo y mi Padre

152 La aparicioacuten de una mayuacutescula al principio de una oracioacuten es algo totalmente arbitrario en este ma-nuscrito dada la libertad ortograacutefica de la autora Como se puede observar en la mayor parte de las veces no es el caso

176 JUAN FRANCISCO MAURA

Ay que me abraso Ay que me quemo del Amor deJesus nasareno como no tocan y tantildeen a fuego

Responde Jesus Hija mia tus simples vozes oygo y aunque resuenan bien a mis oidos pero te deseo mas mansa y pasifica en tus fervores ya sabes que no siempre as de vivir en mantillas ni a los pechos de tu Madre por que es rason que padescas con espiritu fuerte como mu-jer valerosa por que a una esposa del Rey soberano y prinsipe de la paz no le estan bien chiquerias ni fervores de nintildea malcriada y ya es ora que la destete su Madre la Naturaleza y que empesando su nueva vida camine con el favor de mi grasia sigiendo mis passos de eterna vida esto con sus pies descalssos segun mis leyes de Amor puro y desinteresado lo tienen ordenado153 y vivir en paz como lo deje en-cargado a mis apostoles Santos repitiendoles varias vezes Vivir en pas y caridad esto es un vivir en Dios y Dios en el Alma y asi hija mia el Alma que vive en paz vive en mi Como mis cortesanos en el cielo y pues me pides que te ensentildee a vivir segun las leyes de mi condision Repito el desir que te debes mostrar sufrida en todo tiempo y estado sin permitir en tu corason que ni aun los fervores se adelanten con estremos ni ademanes sino atiende y aprende de mi purisima Madre pues siempre la veras si bien lo consideras que mientras vivio en el mundo en todos sus trabajos se mostro firme fuerte costante como piedra diamante Pues mirandome nintildeo entre sus brasos desnudo en el pesebre desnudo y crusificado en los brassos de una cruz En estos y otros passos no se mudo su rostro sino que en suma serenidad y pasifico corason toda se sacrificaba enteramente en los brassos de mi Amor y rendido su corason y voluntad en la de mi eterno Padre por ejemplo te la doy y deseo que aprendas de sus nobles calidades pues te aseguro carisima que las leyes de mi condision y pura verdad todo lo allaras enserrado en el corason de mi purisima Madre sedle fiel y descansaras en paz

+

Quartillas a un alma que padese soledad interior

1Un Alma afligida y tristese ve en un campo desiertay en el su esposo la tieneAtormentada y sedienta

153 Es a traveacutes de estas liacuteneas lo que hace suponer que la autora de este diaacutelogo amoroso entre el Alma y Je-suacutes es novicia esto es laquoque estaacute empesando su nueva vidaraquo En las mismas liacuteneas una vez maacutes se hace alusioacuten al laquodesteteraquo de su vida civil laquoa una esposa del Rey soberano y principe de la paz no le estan bien chiquerias ni fervores de nintildea malcriada y ya es ora que la destete su Madre la naturalesaraquo (fol 5)

177ESPANtildeOLAS DE ULTRAMAR EN LA HISTORIA Y EN LA LITERATURA

2Pendiente se ve en el AyreSolo un hilo la sustentasin tocar el pie en el sueloporque del no tome tierra

3Mirandola esta yto a ytoaquel sol que la atraviesay la enviste con sus rayosmas ella no pestantildeea

4Como sigarra padese y como a tal se atormentabatiendo sus mismas Alasy el corason se atraviesa

5Con penas sustos temoresquando se mira assi mesmasin tener valor en nadaporque es la misma flaquesa

6Pero el Amor de su esposotoda su atension le llevay la pone en un abismopero cubierto en tiniebla

7Desea dar algun bueloy subir con ligeresapero se mira travadacon una fuerte cadena

8Clama suspira y padeseMas del todo se sujetaRindiendo su voluntadA la divina clemencia

9Los enemigos del AlmaCruelmente le asen guerray ella aunque firme y constantelos reselos la atormentan

178 JUAN FRANCISCO MAURA

10de todos modos padeseaunque gosa la asistensiadel divino esposo amadoque en su interior se recrea

11Solo de verla penary con verla tan serenadise resibe mil gustosde su sigarra pequentildea

12Le sabe el mundo a mil yelesy su trato le atormentaviendo en el mil falsedadesque todas saben a tierra

13Para poderse librardeja de correr y buelacon las Alas del Amory el mismo Amor se la lleva

Una vida dedicada a un amor divino un amor que le haraacute llenar un buen nuacutemero de cuartillas dedicadas a tan alta empresa Se desconoce si la vocacioacuten de Sor Nada con-tinuoacute con tanta intensidad el resto de sus diacuteas Ciertamente la vida en el covento no era faacutecil En algunos casos la experiencia era traumaacutetica incluso fatal para algunas de las adolescentes de la Ameacuterica Espantildeola Las reglas del claustro eran severas por varias razones Estas joacutevenes si no teniacutean el permiso de la superiora no podiacutean recibir visitas no podiacutean volver a sus casas su correspondencia era censuraba y no podiacutean salir del periacutemetro conventual Igualmente se levantaban antes del amanecer para oir misa tra-bajaban el resto del diacutea y lo maacutes interesante es que muchas veces esta vida era aceptada por muchas

Page 45: Tercera parte: Mujeres en la vida intelectual - …parnaseo.uv.es/Editorial/Maura/TerceraParte.pdf · La Biblia, por su parte, hace repetidas menciones de la mujer y sobre el comporta-

175ESPANtildeOLAS DE ULTRAMAR EN LA HISTORIA Y EN LA LITERATURA

sangre para que con mi pan de vida te sustentes y te regales a tus an-churas y que con mi propio espiritu vivas en paz como tu lo deseas y que mis amores sean unico alivio en tus trabajos en esta mortal vida pues si esto es asi y sabes que muero por darte vida dime esposa mia de que te fatigas Dame querida tus brassos y dime si me amas como yo te amoResponde el Alma152 Tu mi Dios sabes si yo te amo pues de mi solo se que mis deseos y ansias buelan a ti mas no alcanso a saber si te amo como tu de-seas ser amado y como desconfio tanto de mi y de mis prosederes falssos temo Dios mio perderme y perderte y asi Sentildeor pues no desechas mis Amores y te muestras tan fino en amarme te pido me ensentildees a vivir segun las leyes de tu pura verdad y fina condisionhija mia dise Dios la prueva de un verdadero Amor consiste en sufrir callar y padeser por mi unico Amor y en todo seguir mis pasos sin ja-mas retroseder por mas fragoso que se muestre el camino pues nunca seran tantas las espinas las escarchas ni las nieves ni los vientos bo-rrascosos que te se ofrescan pasar por mi Amor como los que mi tierno y desinteresado Amor paso por ti y siempre con mis pies descalssos y asi hija y esposa mia muestrate costante en seguir lo perfecto de mis passos pues mi braso fuerte sera en ti y peleara por ti y te sera el todo en tus nesesidades y mi Amor te convertira en dulse y suave lo amargo y molesto a la condision de la carrne

Responde el Alma

O mi enamorado Jesus O mi dulse y tierno amanteO alegria de los sielos O dulse Jesus amable

(Toda Sentildeor me derrito toda Sentildeor me desagoy quiero vivir por ti ea sentildeor abrasadme) [Tachado en el original]

Toda Sentildeor me derrito toda Sentildeor me desagoy quiero morir por vos ea Sentildeor que ya acabo

Ya tus amores me llaman ya tus perfumes me traencon suspiros y agonias Sentildeor asta que te alcanse

O mi Jesus amoroso no puedo mas dilatarmeya la pasiensia me falta dulse Jesus abrasadme

(No puedo vivir sin vos no puedo mas dilatarmeya la pasiensia me falta dulse) [Tachado en el original]

No puedo vivir sin vos mi dulse Jesus amablepues me teneis echisada siendo mi esposo y mi Padre

152 La aparicioacuten de una mayuacutescula al principio de una oracioacuten es algo totalmente arbitrario en este ma-nuscrito dada la libertad ortograacutefica de la autora Como se puede observar en la mayor parte de las veces no es el caso

176 JUAN FRANCISCO MAURA

Ay que me abraso Ay que me quemo del Amor deJesus nasareno como no tocan y tantildeen a fuego

Responde Jesus Hija mia tus simples vozes oygo y aunque resuenan bien a mis oidos pero te deseo mas mansa y pasifica en tus fervores ya sabes que no siempre as de vivir en mantillas ni a los pechos de tu Madre por que es rason que padescas con espiritu fuerte como mu-jer valerosa por que a una esposa del Rey soberano y prinsipe de la paz no le estan bien chiquerias ni fervores de nintildea malcriada y ya es ora que la destete su Madre la Naturaleza y que empesando su nueva vida camine con el favor de mi grasia sigiendo mis passos de eterna vida esto con sus pies descalssos segun mis leyes de Amor puro y desinteresado lo tienen ordenado153 y vivir en paz como lo deje en-cargado a mis apostoles Santos repitiendoles varias vezes Vivir en pas y caridad esto es un vivir en Dios y Dios en el Alma y asi hija mia el Alma que vive en paz vive en mi Como mis cortesanos en el cielo y pues me pides que te ensentildee a vivir segun las leyes de mi condision Repito el desir que te debes mostrar sufrida en todo tiempo y estado sin permitir en tu corason que ni aun los fervores se adelanten con estremos ni ademanes sino atiende y aprende de mi purisima Madre pues siempre la veras si bien lo consideras que mientras vivio en el mundo en todos sus trabajos se mostro firme fuerte costante como piedra diamante Pues mirandome nintildeo entre sus brasos desnudo en el pesebre desnudo y crusificado en los brassos de una cruz En estos y otros passos no se mudo su rostro sino que en suma serenidad y pasifico corason toda se sacrificaba enteramente en los brassos de mi Amor y rendido su corason y voluntad en la de mi eterno Padre por ejemplo te la doy y deseo que aprendas de sus nobles calidades pues te aseguro carisima que las leyes de mi condision y pura verdad todo lo allaras enserrado en el corason de mi purisima Madre sedle fiel y descansaras en paz

+

Quartillas a un alma que padese soledad interior

1Un Alma afligida y tristese ve en un campo desiertay en el su esposo la tieneAtormentada y sedienta

153 Es a traveacutes de estas liacuteneas lo que hace suponer que la autora de este diaacutelogo amoroso entre el Alma y Je-suacutes es novicia esto es laquoque estaacute empesando su nueva vidaraquo En las mismas liacuteneas una vez maacutes se hace alusioacuten al laquodesteteraquo de su vida civil laquoa una esposa del Rey soberano y principe de la paz no le estan bien chiquerias ni fervores de nintildea malcriada y ya es ora que la destete su Madre la naturalesaraquo (fol 5)

177ESPANtildeOLAS DE ULTRAMAR EN LA HISTORIA Y EN LA LITERATURA

2Pendiente se ve en el AyreSolo un hilo la sustentasin tocar el pie en el sueloporque del no tome tierra

3Mirandola esta yto a ytoaquel sol que la atraviesay la enviste con sus rayosmas ella no pestantildeea

4Como sigarra padese y como a tal se atormentabatiendo sus mismas Alasy el corason se atraviesa

5Con penas sustos temoresquando se mira assi mesmasin tener valor en nadaporque es la misma flaquesa

6Pero el Amor de su esposotoda su atension le llevay la pone en un abismopero cubierto en tiniebla

7Desea dar algun bueloy subir con ligeresapero se mira travadacon una fuerte cadena

8Clama suspira y padeseMas del todo se sujetaRindiendo su voluntadA la divina clemencia

9Los enemigos del AlmaCruelmente le asen guerray ella aunque firme y constantelos reselos la atormentan

178 JUAN FRANCISCO MAURA

10de todos modos padeseaunque gosa la asistensiadel divino esposo amadoque en su interior se recrea

11Solo de verla penary con verla tan serenadise resibe mil gustosde su sigarra pequentildea

12Le sabe el mundo a mil yelesy su trato le atormentaviendo en el mil falsedadesque todas saben a tierra

13Para poderse librardeja de correr y buelacon las Alas del Amory el mismo Amor se la lleva

Una vida dedicada a un amor divino un amor que le haraacute llenar un buen nuacutemero de cuartillas dedicadas a tan alta empresa Se desconoce si la vocacioacuten de Sor Nada con-tinuoacute con tanta intensidad el resto de sus diacuteas Ciertamente la vida en el covento no era faacutecil En algunos casos la experiencia era traumaacutetica incluso fatal para algunas de las adolescentes de la Ameacuterica Espantildeola Las reglas del claustro eran severas por varias razones Estas joacutevenes si no teniacutean el permiso de la superiora no podiacutean recibir visitas no podiacutean volver a sus casas su correspondencia era censuraba y no podiacutean salir del periacutemetro conventual Igualmente se levantaban antes del amanecer para oir misa tra-bajaban el resto del diacutea y lo maacutes interesante es que muchas veces esta vida era aceptada por muchas

Page 46: Tercera parte: Mujeres en la vida intelectual - …parnaseo.uv.es/Editorial/Maura/TerceraParte.pdf · La Biblia, por su parte, hace repetidas menciones de la mujer y sobre el comporta-

176 JUAN FRANCISCO MAURA

Ay que me abraso Ay que me quemo del Amor deJesus nasareno como no tocan y tantildeen a fuego

Responde Jesus Hija mia tus simples vozes oygo y aunque resuenan bien a mis oidos pero te deseo mas mansa y pasifica en tus fervores ya sabes que no siempre as de vivir en mantillas ni a los pechos de tu Madre por que es rason que padescas con espiritu fuerte como mu-jer valerosa por que a una esposa del Rey soberano y prinsipe de la paz no le estan bien chiquerias ni fervores de nintildea malcriada y ya es ora que la destete su Madre la Naturaleza y que empesando su nueva vida camine con el favor de mi grasia sigiendo mis passos de eterna vida esto con sus pies descalssos segun mis leyes de Amor puro y desinteresado lo tienen ordenado153 y vivir en paz como lo deje en-cargado a mis apostoles Santos repitiendoles varias vezes Vivir en pas y caridad esto es un vivir en Dios y Dios en el Alma y asi hija mia el Alma que vive en paz vive en mi Como mis cortesanos en el cielo y pues me pides que te ensentildee a vivir segun las leyes de mi condision Repito el desir que te debes mostrar sufrida en todo tiempo y estado sin permitir en tu corason que ni aun los fervores se adelanten con estremos ni ademanes sino atiende y aprende de mi purisima Madre pues siempre la veras si bien lo consideras que mientras vivio en el mundo en todos sus trabajos se mostro firme fuerte costante como piedra diamante Pues mirandome nintildeo entre sus brasos desnudo en el pesebre desnudo y crusificado en los brassos de una cruz En estos y otros passos no se mudo su rostro sino que en suma serenidad y pasifico corason toda se sacrificaba enteramente en los brassos de mi Amor y rendido su corason y voluntad en la de mi eterno Padre por ejemplo te la doy y deseo que aprendas de sus nobles calidades pues te aseguro carisima que las leyes de mi condision y pura verdad todo lo allaras enserrado en el corason de mi purisima Madre sedle fiel y descansaras en paz

+

Quartillas a un alma que padese soledad interior

1Un Alma afligida y tristese ve en un campo desiertay en el su esposo la tieneAtormentada y sedienta

153 Es a traveacutes de estas liacuteneas lo que hace suponer que la autora de este diaacutelogo amoroso entre el Alma y Je-suacutes es novicia esto es laquoque estaacute empesando su nueva vidaraquo En las mismas liacuteneas una vez maacutes se hace alusioacuten al laquodesteteraquo de su vida civil laquoa una esposa del Rey soberano y principe de la paz no le estan bien chiquerias ni fervores de nintildea malcriada y ya es ora que la destete su Madre la naturalesaraquo (fol 5)

177ESPANtildeOLAS DE ULTRAMAR EN LA HISTORIA Y EN LA LITERATURA

2Pendiente se ve en el AyreSolo un hilo la sustentasin tocar el pie en el sueloporque del no tome tierra

3Mirandola esta yto a ytoaquel sol que la atraviesay la enviste con sus rayosmas ella no pestantildeea

4Como sigarra padese y como a tal se atormentabatiendo sus mismas Alasy el corason se atraviesa

5Con penas sustos temoresquando se mira assi mesmasin tener valor en nadaporque es la misma flaquesa

6Pero el Amor de su esposotoda su atension le llevay la pone en un abismopero cubierto en tiniebla

7Desea dar algun bueloy subir con ligeresapero se mira travadacon una fuerte cadena

8Clama suspira y padeseMas del todo se sujetaRindiendo su voluntadA la divina clemencia

9Los enemigos del AlmaCruelmente le asen guerray ella aunque firme y constantelos reselos la atormentan

178 JUAN FRANCISCO MAURA

10de todos modos padeseaunque gosa la asistensiadel divino esposo amadoque en su interior se recrea

11Solo de verla penary con verla tan serenadise resibe mil gustosde su sigarra pequentildea

12Le sabe el mundo a mil yelesy su trato le atormentaviendo en el mil falsedadesque todas saben a tierra

13Para poderse librardeja de correr y buelacon las Alas del Amory el mismo Amor se la lleva

Una vida dedicada a un amor divino un amor que le haraacute llenar un buen nuacutemero de cuartillas dedicadas a tan alta empresa Se desconoce si la vocacioacuten de Sor Nada con-tinuoacute con tanta intensidad el resto de sus diacuteas Ciertamente la vida en el covento no era faacutecil En algunos casos la experiencia era traumaacutetica incluso fatal para algunas de las adolescentes de la Ameacuterica Espantildeola Las reglas del claustro eran severas por varias razones Estas joacutevenes si no teniacutean el permiso de la superiora no podiacutean recibir visitas no podiacutean volver a sus casas su correspondencia era censuraba y no podiacutean salir del periacutemetro conventual Igualmente se levantaban antes del amanecer para oir misa tra-bajaban el resto del diacutea y lo maacutes interesante es que muchas veces esta vida era aceptada por muchas

Page 47: Tercera parte: Mujeres en la vida intelectual - …parnaseo.uv.es/Editorial/Maura/TerceraParte.pdf · La Biblia, por su parte, hace repetidas menciones de la mujer y sobre el comporta-

177ESPANtildeOLAS DE ULTRAMAR EN LA HISTORIA Y EN LA LITERATURA

2Pendiente se ve en el AyreSolo un hilo la sustentasin tocar el pie en el sueloporque del no tome tierra

3Mirandola esta yto a ytoaquel sol que la atraviesay la enviste con sus rayosmas ella no pestantildeea

4Como sigarra padese y como a tal se atormentabatiendo sus mismas Alasy el corason se atraviesa

5Con penas sustos temoresquando se mira assi mesmasin tener valor en nadaporque es la misma flaquesa

6Pero el Amor de su esposotoda su atension le llevay la pone en un abismopero cubierto en tiniebla

7Desea dar algun bueloy subir con ligeresapero se mira travadacon una fuerte cadena

8Clama suspira y padeseMas del todo se sujetaRindiendo su voluntadA la divina clemencia

9Los enemigos del AlmaCruelmente le asen guerray ella aunque firme y constantelos reselos la atormentan

178 JUAN FRANCISCO MAURA

10de todos modos padeseaunque gosa la asistensiadel divino esposo amadoque en su interior se recrea

11Solo de verla penary con verla tan serenadise resibe mil gustosde su sigarra pequentildea

12Le sabe el mundo a mil yelesy su trato le atormentaviendo en el mil falsedadesque todas saben a tierra

13Para poderse librardeja de correr y buelacon las Alas del Amory el mismo Amor se la lleva

Una vida dedicada a un amor divino un amor que le haraacute llenar un buen nuacutemero de cuartillas dedicadas a tan alta empresa Se desconoce si la vocacioacuten de Sor Nada con-tinuoacute con tanta intensidad el resto de sus diacuteas Ciertamente la vida en el covento no era faacutecil En algunos casos la experiencia era traumaacutetica incluso fatal para algunas de las adolescentes de la Ameacuterica Espantildeola Las reglas del claustro eran severas por varias razones Estas joacutevenes si no teniacutean el permiso de la superiora no podiacutean recibir visitas no podiacutean volver a sus casas su correspondencia era censuraba y no podiacutean salir del periacutemetro conventual Igualmente se levantaban antes del amanecer para oir misa tra-bajaban el resto del diacutea y lo maacutes interesante es que muchas veces esta vida era aceptada por muchas

Page 48: Tercera parte: Mujeres en la vida intelectual - …parnaseo.uv.es/Editorial/Maura/TerceraParte.pdf · La Biblia, por su parte, hace repetidas menciones de la mujer y sobre el comporta-

178 JUAN FRANCISCO MAURA

10de todos modos padeseaunque gosa la asistensiadel divino esposo amadoque en su interior se recrea

11Solo de verla penary con verla tan serenadise resibe mil gustosde su sigarra pequentildea

12Le sabe el mundo a mil yelesy su trato le atormentaviendo en el mil falsedadesque todas saben a tierra

13Para poderse librardeja de correr y buelacon las Alas del Amory el mismo Amor se la lleva

Una vida dedicada a un amor divino un amor que le haraacute llenar un buen nuacutemero de cuartillas dedicadas a tan alta empresa Se desconoce si la vocacioacuten de Sor Nada con-tinuoacute con tanta intensidad el resto de sus diacuteas Ciertamente la vida en el covento no era faacutecil En algunos casos la experiencia era traumaacutetica incluso fatal para algunas de las adolescentes de la Ameacuterica Espantildeola Las reglas del claustro eran severas por varias razones Estas joacutevenes si no teniacutean el permiso de la superiora no podiacutean recibir visitas no podiacutean volver a sus casas su correspondencia era censuraba y no podiacutean salir del periacutemetro conventual Igualmente se levantaban antes del amanecer para oir misa tra-bajaban el resto del diacutea y lo maacutes interesante es que muchas veces esta vida era aceptada por muchas