taller grupal déficit atencional: manual del monitor
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Este Manual constituye una herramienta de información confiable y actualizada hacia la ciudadanía respecto a la temática, en defensa de los derechos de los niños y niñas, contra la medicación psiquiátrica de la infancia.TRANSCRIPT
Manual del Monitor
Taller Grupal “La Atención que no se presta:
Mitos y Realidades en torno al Déficit Atencional/Hiperactividad (TDA/H)”
? ¿
Manual del Monitor Taller Grupal Déficit Atencional por Centro de Estudios de Contrapsicología
se encuentra bajo una Licencia Creative Commons Atribución-NoComercial-SinDerivadas 3.0
Unported.
PRESENTACIÓN
¿Por qué elaborar este manual?
El Déficit Atencional/Hiperactividad (TDA/H) se ha convertido en un problema de moda en la
actualidad, su difusión en los medios de comunicación y presencia en la vida cotidiana de las personas
genera mucha preocupación e interés en los padres cuando sus hijos presentan dificultades en la escuela
y son alertados por los profesores sobre su posible presencia. Existen muchas formas de comprender el
TDA/H y es posible encontrar muchas opiniones contradictorias entre los distintos especialistas al
respecto. Representa un tema polémico, de opinión pública y debate científico en muchos países. Por
esta razón se hace necesario socializar y hacer accesible a los ciudadanos, y en particular al interior de
los sectores populares, información confiable y actualizada que permita asumir una visión más amplia
del problema.
Desde una perspectiva crítica y para comprender el marco general en el cual la problemática se
inscribe, hay dos conceptos importantes a considerar. La medicación, que es una práctica psiquiátrica
generalizada donde el fármaco se transforma en la principal forma de abordaje y tratamiento de
alteraciones del comportamiento, malestar y sufrimiento subjetivo en los programas de Salud mental.
Por otra parte, la medicalización, hace referencia a los factores políticos, sociales y económicos que
intervienen en la producción, distribución y venta de las grandes industrias de tecnología médica y
farmacológica. Ambos términos se han venido usando para demostrar los efectos en la medicina de la
mundialización capitalista, donde lo único que importa es la utilidad de los resultados inmediatos y la
ganancia económica de las empresas médicas y farmacéuticas. En este contexto creemos que se inscribe
la problemática del TDA/H, en base a la inserción progresiva del modelo médico y la mirada clínica en
las instituciones educativas con el fin de abordar problemas pedagógicos, junto a un marco explicativo
donde supuestas dificultades cerebrales específicas de los/as niños/as serían las causas que dificultan
un buen rendimiento escolar o adecuado comportamiento en la sala de clases.
Considerando el complejo escenario descrito, el presente Manual del Monitor representa un
intento por documentar y sistematizar dos experiencias de Taller grupal realizados por estudiantes
egresados de psicología en conjunto con madres y padres estudiantes de INFOCAP, comuna de San
Joaquín. Esta breve aunque rica experiencia nos llevó a plantearnos la necesidad de compartir ciertos
procedimientos y contenidos que nos resultaron útiles a la hora de sensibilizar a la población acerca del
sobrediagnóstico de TDA/H en las instituciones educativas y los riesgos de la medicación psiquiátrica.
El Manual del Monitor que aquí presentamos debe entenderse como un instrumento de difusión
y socialización de información actualizada relacionada al tema del Déficit Atencional/Hiperactividad,
destinada a cualquiera que se interese en la temática y que desee realizar un taller grupal con otras
personas. Consideramos fundamental hacer accesible a los sectores populares y a la sociedad civil en
general, el conocimiento necesario y las garantías científicas mínimas que deben ser exigidas como
respaldo para lograr erradicar las formas arbitrarias de violencia institucional que se ejercen sobre la
infancia, tanto en el contexto escolar como en las instituciones de salud, en base al diagnóstico y
tratamiento del TDA/H. Al mismo tiempo, buscamos promover espacios grupales y de construcción
colectiva donde los/as ciudadanos/as se informen y participen activamente en la defensa de los
derechos de sus hijos y en la solución de las problemáticas que les afectan desde una perspectiva
solidaria y humanista.
En este sentido, este Manual del Monitor responde a un Enfoque de derechos, diseñado para
que diversas personas, líderes comunitarios y organizaciones ligadas directa o indirectamente al tema
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de la salud mental, la educación o la infancia, puedan contribuir activamente en defender el derecho de
niños y niñas a explotar sus potencialidades, reconociendo y validando su diversidad, construyendo
espacios educativos libres de discriminación, etiquetaciones arbitrarias y fármacos riesgosos.
Del mismo modo, este documento promueve una Salud mental popular, en cuanto no intenta
imponer una ideología desde el poder institucional, sino que facilita que emerjan las potencialidades,
que madure lo inmaduro, que aparezca lo latente y crezca lo iniciado. En este sentido, por ejemplo,
valora y legitima las razones y creencias que muchas madres y muchos padres poseen para negarse a
administrar el fármaco a sus hijos/as, las cuales varían desde el reporte de efectos secundarios en el/la
niño/a como insomnio, falta de apetito, náuseas, vómitos, dolores abdominales y desórdenes digestivos,
hasta justificaciones teóricas o de tipo valórico, así como explicaciones de que el problema es del
colegio, de las metodologías y de los profesores, que les gusta su hijo/a tal como es, que es un asunto de
tiempo y maduración, y que, en fin, no aceptan que se trate a su hijo/a como un/a enfermo/a. De esta
manera, el presente Manual del Monitor reconoce la importancia de la experiencia interpretada por
cada sujeto en base a su acervo cultural propio y la participación e incorporación de la comunidad en el
desarrollo y producción de sus propios modelos de salud mental de manera autónoma, en oposición,
muchas veces, a las prácticas institucionales amparadas bajo el modelo del Estado y el Mercado.
La recopilación del material contenido en este texto ha sido llevada a cabo con el apoyo del
Frente Antipsiquiátrico: Movimiento contra la psiquiatrización de la subjetividad y el equipo de
trabajo “Educación, Infancia y Violencia institucional”, del Centro de Estudios de Contrapsicología
(CEC) y la Organización Chilena de Estudiantes de Psicología (OCEP), cuyo proceso ha sido facilitado
enormemente por otros estudiantes, organizaciones y colectivos que han trabajado desde hace tiempo
en este tema. Agradecemos a Esteban Encina Zúñiga, egresado de Psicología de la Universidad de Chile,
por la importante referencia bibliográfica que encontramos en su trabajo de tesis "¿Déficit Atencional o
Diagnóstico Comodín? Estética de poder, estatus de verdad y diagnóstico clínico"; al Observatorio
Chileno de Políticas Educativas (OPECH) y al Grupo de Estudios y Trabajo en Educación Popular
(GETEP) de la Universidad de Chile, y, en particular, a los pobladores agrupados en el Movimiento
Pueblo Sin Techo (MPST) de La Pintana, quienes han logrado hacer visible la vulneración de derechos
en relación a la medicación de la infancia y nos han aportado gran parte de la información que hoy nos
permite sostener nuestros argumentos de manera certera y confiable. Muchas afirmaciones que se
expresan en este documento se las debemos a su vez al importante trabajo que ha realizado la
“Comisión de Ciudadanos por los Derechos humanos” (CCHR), a través de la cual pretendemos acercar
a nuestro país el fecundo debate respecto al abuso psiquiátrico que tiene lugar a nivel internacional, e
instalar discusiones en torno a los modelos de Salud mental como un asunto ciudadano que no debe ser
exclusivo de los profesionales o expertos. Por último, agradecemos especialmente a Eduardo Gavilán de
INFOCAP por su apoyo a la iniciativa de realizar este Manual y a todas las personas que trabajaron con
nosotros en la realización de los talleres el primer semestre de este año, a las cuales este Manual está
dedicado con mucho cariño y gratitud.
¿En qué consiste este manual?
La elaboración de este manual ha sido pensada bajo un formato de taller psicoeducativo grupal,
planificado para cuatro sesiones de una hora y media. Las sesiones siguen un modelo de educación
programada, dividida según objetivos específicos trabajados clase a clase. Los objetivos generales del
taller están orientados principalmente a presentar información confiable acerca del TDA/H como
“problema” y entregar recomendaciones y herramientas prácticas psicoeducativas, principalmente
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derribando mitos que han sido puestos en circulación por instituciones y disciplinas que tienen
intereses económicos y políticos al respecto. Paralelamente, se busca el encuentro de los padres y
madres, compartir las distintas experiencias, inquietudes, y por supuesto, las alternativas de abordaje
propuestos desde ellos mismos. En resumen, los objetivos del taller propuesto en este Manual del
Monitor se pueden resumir en los siguientes:
Compartir y socializar información científica actualizada en torno al diagnóstico y
tratamiento del Déficit Atencional/Hiperactividad (TDA/H) a través de un lenguaje
comprensible.
Informar y prevenir a los padres y apoderados de los efectos negativos de la medicación
psiquiátrica como forma de tratamiento del TDA/H.
Entregar a los padres y apoderados herramientas para que puedan defender los derechos
de los niños y el derecho que tienen a educarse según las normativas que establece el
Ministerio de Educación.
Promover el sentido de seguridad, capacidad y responsabilidad de los propios padres y
las comunidades de base como agentes activos en el proceso educativo y de crianza de
sus hijos.
Creemos que la organización de talleres psicoeducativos es la mejor estrategia para sensibilizar a
la población sobre el tema, no sólo por la optimización de recursos que ello implica, sino por el hecho de
que la visión crítica con la que este documento aborda el tema del Déficit Atencional/Hiperactividad se
opone en muchos aspectos a la ideología imperante que se promueve desde las instituciones de salud y
educación. Por esta razón, es necesario que la aproximación hacia una perspectiva crítica del TDA/H
sea guiada por un monitor capacitado (que puede ser profesional o un miembro de la comunidad no
profesional), para responder preguntas, facilitar la discusión al interior del grupo y asegurar un
ambiente acogedor y de respeto que sea capaz de comprender las resistencias que conlleva todo proceso
de cambio en la forma de ver las cosas.
La Autonomía y el Poder popular como horizonte
Quisiéramos hacer una aclaración respecto a las condiciones éticas y políticas bajo las cuáles
este manual debe ser aprovechado. La intención de este Manual del Monitor no busca bajo ninguna
circunstancia la estandarización de los procedimientos o los contenidos que tienen que ver con el
diagnóstico de TDA/H; por el contrario, pretende sistematizar cierta información que consideramos
relevante, pero que debe ser adaptada y enriquecida de manera permanente según las diferencias
sociales y culturales de la población en que se aplica.
Considerando lo anterior, este Manual del Monitor debe entenderse sólo como un instrumento,
al igual que el formato de taller grupal que aquí se propone. Son las condiciones sociales y los esfuerzos
de coordinación a nivel territorial los que le pueden otorgar un carácter transformador a su uso y los
que pueden traducirse en un empoderamiento real de los ciudadanos/as, los pobladores/as y las
comunidades en defensa de los derechos de la infancia. Por eso es que como horizonte práctico,
planteamos la necesidad de poner en circulación este instrumento de manera “intracomunitaria”, es
decir, traspasar la responsabilidad de educar e informar a los padres y madres a los propios líderes
comunitarios o las organizaciones territoriales insertas al interior de la comunidad. La iniciativa debe
partir en primera instancia por parte de los profesionales de la salud y los educadores, ya que son los
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que tienen la credibilidad suficiente para poder romper los sesgos que están más arraigados en el
sentido común. Sin embargo, la información debe ser adaptada a los distintos contextos sociales, con un
lenguaje que resulte familiar a la población en donde se implementa y sobre todo donde las soluciones,
consejos prácticos y líneas de acción sean construidos desde los propios actores, tomando en cuenta los
elementos culturales y los recursos que se encuentran presentes en su realidad cotidiana. Por ello, es
que el saber debe ser delegado finalmente a Monitores entrenados, miembros de la propia comunidad,
que sean capaces de traducir los contenidos mínimos a un modelo de educación popular, ese es el fin
último del material presentado en este Manual del Monitor.
En este sentido, es responsabilidad del monitor que implementará el taller psicoeducativo,
aprovechar el material que se recoge en este manual en función de las necesidades del grupo, ya sea
recogiendo la información más básica, complementando inquietudes que aquí no aparecen resueltas,
promoviendo la participación y la generación de propuestas colectivas, aportando dinámicas y ejemplos
que puedan ser más comprensibles para los padres o madres y, por supuesto, capacitando y motivando
a más personas a ejercer el rol de monitor para que el taller se multiplique a sí mismo. Por supuesto que
paralelo a esto es importante generar las condiciones sociales necesarias en términos de desarrollo de
autogestión local y organización comunitaria para construir un terreno fértil donde poder sembrar una
cultura a favor de la des-medicalización de los problemas sociales y la politización de las prácticas y los
modelos de Salud mental.
En definitiva, nuestra firme convicción es que la medicación de los problemas sociales y la
medicalización de la vida cotidiana es un problema político de primer orden que requiere una respuesta
política. Por eso nuestra lucha es política, y por eso la salida debe ser política: fortalecer un movimiento
ciudadano que pretenda conseguir que los profesionales y la población tomen conciencia de la nula
validez de los diagnósticos de trastornos mentales y se opongan a psiquiatrización y psicologización de
los problemas subjetivos que son producto de las condiciones históricas de dominación, explotación,
exclusión, marginación y desigualdad propias de la sociedad capitalista y su Estado represivo.
Morelia Álvarez Decar
Jorge Benítez Saavedra
Juan Carlos Cea Madrid
Marco Díaz Escobar
Licenciados en Psicología
Universidad de Santiago de Chile
Centro de Estudios de Contrapsicología (CEC).
Organización Chilena de Estudiantes de Psicología (OCEP).
Septiembre, 2011.
PD: Este Manual del Monitor presenta los contenidos mínimos para llevar a cabo el Taller grupal que
presenta como iniciativa posible. Todos los textos y documentos que fueron utilizados en la confección
del Manual del Monitor y los materiales (dípticos, presentaciones en diapositivas, etc.) que fuimos
creando durante la realización del Taller Grupal los ponemos a disposición de lo/as interesado/as. Para
ello, lo/as invitamos a escribir al mail [email protected]
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ESTRUCTURA DEL MANUAL
El Manual del Monitor consta de 4 sesiones, las cuales se dividen por temáticas específicas. En cada una de las sesiones se consideran los siguientes aspectos: 1. Tema: Nombre dado al contenido general que se abordará en cada sesión. (Globo de color azul). Ejemplo: 2. Objetivos: Lineamentos que se esperan lograr en cada sesión de acuerdo al tema y el contenido general a tratar. (Rectángulo de color verde). Ejemplo: 3. Instrucciones: Son indicaciones prácticas para el/la monitor/a, las cuales permiten orientar y llevar adelante la conducción de las tareas de forma grupal. (Letra normal, sin cursiva, ni negrita). Ejemplo:
Antes de comenzar la sesión ubique las sillas en círculo, con el fin de contribuir a una mejor comunicación entre los presentes… 4. Comentarios: Son intervenciones o preguntas que el/la monitor/a realiza de forma intencionada con el fin de dar cumplimiento a los objetivos, las cuales están orientadas a enfatizar, problematizar y discutir cierta información entregada durante la sesión. (Letra negrita tipo cursiva, párrafos entre comillas y en rectángulo de color café).
Ejemplo:
5. Información: Es el contenido mínimo relacionado al tema de cada sesión, el cual puede ser expuesto explícitamente al grupo por medio de su lectura en voz alta o por medio de la entrega de dípticos informativos. (Letra negrita, sin cursiva).
Tema: “Introducción al Déficit Atencional/Hiperactividad (TDA/H) como problemática”
Objetivos:
- Conocer la motivación y expectativas de los/las participantes en relación a la apertura
de este espacio.
- Intercambiar información y experiencias entre los participantes en torno al Déficit
Atencional/Hiperactividad.
- Introducir de manera preliminar el tema del Déficit Atencional/Hiperactividad dentro
de una mirada crítica.
“Cómo padres tenemos muchas responsabilidades: trabajo, estudios, tareas del hogar y además hacernos cargo de la crianza y educación de nuestros hijos”...
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Ejemplo: No es lo mismo hablar de un niño/a que tiene un problema conductual, que le
cuesta adaptarse al contexto de la sala de clases, que hablar de un niño que tiene una alteración en su cerebro, una dificultad orgánica que estaría a la base de su conducta……. 6. Comentarios: Espacio en blanco con el objetivo de ser llenado por el/la monitor/a con preguntas o comentarios del grupo que serán importantes abordar al final de cada sesión o ser recordados para la siguiente sesión. 7. Anexos: Documentos complementarios al Manual, los cuales pueden ser entregados a los participantes del taller grupal de manera directa para su lectura y difusión. 8. Bibliografía: Listado de referencias de textos, artículos, libros y documentos que fundamentan o complementan la información entregada en el presente Manual, relacionados principalmente a un enfoque científico-crítico del diagnóstico y tratamiento del TDA/H así como a enfoques alternativos respecto a la comprensión y abordaje del TDA/H en el ámbito psicoeducativo.
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1. Presentación general del Taller grupal.
Antes de comenzar la sesión ubique las sillas en círculo, con el fin de contribuir a una mejor
comunicación entre los presentes. Considere que esta disposición física de las sillas se recomienda para
cada una de las siguientes clases. La sesión puede iniciarse con la siguiente presentación del taller por
parte del monitor:
Seguido de lo anterior exponga los objetivos que se esperan cumplir en este taller grupal:
Acoger inquietudes, preguntas, reflexiones y experiencias en relación a la temática
del Déficit Atencional/Hiperactividad.
Generar un espacio de conversación y apoyo en relación a las preocupaciones
asociadas al Déficit Atencional/ Hiperactividad.
Dar orientación, entregar herramientas y desarrollar soluciones prácticas en
torno al tema del Déficit Atencional/Hiperactividad.
Luego, al hacer entrega del programa del taller (Anexo 1), mencione que los objetivos anteriores
se abordaran en 4 sesiones complementarias, por lo que es importante asistir a cada una de ellas. Lea
en voz alta las temáticas que serán abordadas en cada una de las sesiones y posteriormente comente que
Primera sesión
Tema: “Introducción al Déficit Atencional/Hiperactividad (TDA/H) como problemática”
Objetivos:
- Conocer la motivación y expectativas de los/las participantes en relación a la
apertura de este espacio.
- Intercambiar información y experiencias entre los participantes en torno al Déficit
Atencional/Hiperactividad.
- Introducir de manera preliminar el tema del Déficit Atencional/Hiperactividad
dentro de una mirada crítica.
“Cómo padres tenemos muchas responsabilidades: trabajo, estudios, tareas
del hogar y además hacernos cargo de la crianza y educación de nuestros hijos.
Queremos que éstos crezcan sanos y fuertes, que aprendan valores y que les vaya
bien en el colegio, para que así tengan un mejor futuro. Pero, ¿Qué hacer cuando el
colegio nos dice que hay problemas con nuestro hijo o hija?, ¿Cómo reaccionamos?,
¿Qué podemos hacer? A menudo nos preocupamos, nos sentimos culpables,
intentamos buscar ayuda profesional, sentimos una especial preocupación por
saber cómo ayudar a nuestros hijos e hijas ¿Cómo enfrentar esta situación? El
Taller Grupal constituye un espacio de conversación para acoger preguntas e
inquietudes en torno al Déficit Atencional/Hiperactividad y recibir orientación
acerca de cómo podemos ayudar a nuestros hijos”.
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esta primera sesión es introductoria, lo que implica una breve presentación de los/as participantes,
además de un primer acercamiento al tema en cuestión.
A continuación de paso a la presentación de los/as participantes del grupo, para ello invite a las
personas a decir su nombre, comentar acerca de la motivación que los/as llevó a participar y las
expectativas que tienen de este espacio. Como una forma de facilitar la presentación se puede pedir que
se respondan las siguientes preguntas: “¿Qué me motivó a participar de este espacio?”,
“¿Cuáles son las expectativas que tengo al respecto?”.
El/La monitor/a también puede presentarse, señalando su nombre y retomando brevemente,
por ejemplo, los objetivos que presentó en un comienzo, como una forma de exponer sus intereses y
expectativas para con el taller y el grupo en general.
Importante: Es probable que entre los comentarios que se hagan en esta primera instancia surja la
demanda por conocer consejos prácticos que permitan dar solución a problemáticas particulares, por
ejemplo: “¿qué puedo hacer para que mi hijo se concentre?”.En estos casos se recomienda volver a
explicar que el Taller se desarrollará en 4 sesiones y que, por lo tanto, las recomendaciones y consejos
prácticos forman parte de la cuarta sesión.
2. Actividad grupal "¿Qué entendemos por Déficit Atencional?"
Una vez que se ha realizado la presentación de los/las participantes del taller, se invita a las
personas a realizar la actividad grupal denominada: “¿Qué entendemos por Déficit Atencional?”,
la cual tiene por objetivo conocer las ideas que las personas del grupo tienen sobre la
temática. Se sugiere presentar la actividad de la siguiente forma:
Se recomienda escribir cada una de las preguntas en cartulinas diferentes que se ubiquen en un
lugar visible para el grupo al momento de realizar la actividad. El/la monitor/a debe encargarse de ir
escribiendo en la cartulina las respuestas que emergen del grupo. Las preguntas se realizan por orden,
esperando que se responda cada una para continuar con la siguiente.
“A continuación vamos a realizar una actividad grupal, la cual hemos denominado:
¿Qué entendemos por Déficit Atencional?
Esta consiste en responder tres preguntas que nos permitirán aproximarnos a lo que
nosotros/as mismos/as pensamos y conocemos sobre el Déficit
Atencional/Hiperactividad”
“Como sabemos, el Déficit Atencional en el último tiempo ha representado un
tema recurrente y habitual para la comunidad escolar y la opinión pública en
general. Los medios de comunicación se refieren a la problemática como una suerte
de epidemia, dando tribuna a especialistas del gremio médico y psicológico para
referirse al respecto, divulgando sus características, modos de detección y
tratamiento. Por esta razón, muchos de los problemas o dificultades que los niños/as
presentan en la sala de clases aparecen bajo el nombre de Déficit
Atencional/Hiperactividad. Nos gustaría comenzar este taller conociendo qué
entienden ustedes por Déficit Atencional, qué saben sobre él, dónde han escuchado
hablar de él y quienes les han comentado sobre su existencia”.
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Primero se plantea la pregunta:
“¿Qué entendemos por Déficit Atencional/Hiperactividad?”.
Una vez que los/las participantes han respondido y el/la monitor/a ha tomado registro se pasa a la
segunda pregunta:
“¿Cuáles creen que son las causas del Déficit Atencional/Hiperactividad?”.
Finalmente se realiza la pregunta:
“¿Cuáles han sido las fuentes donde se han informado?”.
Una vez finalizada la actividad el/la monitor/a lee al grupo las respuestas que ha registrado en
las cartulinas y explica el objetivo de esta actividad:
Es probable que las distintas respuestas entregadas por las personas puedan estar representadas
en el siguiente cuadro resumen:
“¿Qué entendemos por Déficit
Atencional/Hiperactividad?”, “¿Cuáles son sus
causas?”
Fuentes: Personas que nos han hablado del
Déficit Atencional/Hiperactividad
a) TDA-H como un problema individual y
orgánico - cerebral (enfoque médico).
Ej: “Los niños tienen algo malo en la cabecita,
como un cablecito pelado que no hace que se
concentre o que sea muy hiperactivo “.
b) TDA-H como un problema individual y
psicológico (enfoque motivacional-conductual).
Ej:“Los niños se aburren muy fácilmente, se
distraen con cualquier cosa que pase a su
alrededor, otros son muy inquietos nunca se
quedan tranquilos y hablan todo el rato, les gusta
llamar la atención de los padres”
c) TDA-H como un problema del sistema
educativo o de la institución escolar (enfoque
psicosocial).
Ej: “En una sala con 40 alumnos es súper difícil
que todos los alumnos se porten bien, que los
niños se comporten también depende de la forma
en que los profesores realizan la clase"
- Profesor - Orientador - Inspector - Pediatra - Fonoaudiólogo - Psicopedagogo - Psicólogo - Neurólogo - Vecina o familiar
“Es importante comprender cómo cada una de las personas que conforman el grupo
entienden de forma distinta el Déficit Atencional/Hiperactividad, en base a las diferentes
fuentes de información, las creencias personales y experiencias familiares que las
personas han tenido en torno a la temática”
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A partir de este cuadro resumen, que sirve como marco comprensivo de las diversas respuestas
que pueda haber dado al grupo, es importante mostrar cómo las distintas respuestas entregadas
por las personas son distintas entre sí y dependen de los distintos enfoques (médico,
motivacional-conductual y psicosocial) que existen para comprender, explicar y abordar
el Déficit Atencional/Hiperactividad. En base a eso, mencione la siguiente información:
No es lo mismo hablar de un niño/a que tiene un problema en su cerebro, una
dificultad orgánica que no le permite tomar atención en clases y lo hace ser muy
hiperactivo, que hablar de un niño/a que puede ser inquieto, activo y curioso, con un
ritmo distinto de aprendizaje, para quien las actividades escolares no le resultan lo
suficientemente estimulantes y motivantes, lo que lleva a que se aburra o se distraiga
mucho en clases.
Como se darán cuenta, ambas formas de ver el problema son muy distintas entre
sí, las dos maneras de comprender el problema representan explicaciones totalmente
distintas para el mismo fenómeno. De esta manera, no es lo mismo, por un lado,
comprender el Déficit Atencional/Hiperactividad como una enfermedad mental, un
problema cerebral y, por otro lado, como un problema de desadaptación del niño/a al
contexto escolar o como una desadaptación de la Escuela a las diferentes necesidades
educativas de los niños/as, por ejemplo.
Hoy en día, a través de la construcción del diagnóstico de TDA/H es posible
observar cómo determinadas conductas y situaciones comunes en los niños y niñas, que
antes eran abordadas por las familias en las casas y profesores en las escuelas, ahora son
entendidas como una problemática de Salud mental, una enfermedad que debe ser
abordada por un tratamiento médico, llevando a que en muchos casos se prescriban
fármacos a niños y niñas como forma de tratamiento y solución para el TDA/H.
En nuestro país, está muy de moda que una vez realizado el diagnóstico de TDA/H
en los niños/as, la recomendación más común para los padres sea darles fármacos a sus
hijos para tratar el problema. Los padres, con la mejor intención de ayudar a sus hijos y
abordar esta dificultad o presionados para tomar una decisión, siguen la recomendación
de los especialistas y les dan el medicamento, esto sin saber de las graves consecuencias
que estas drogas pueden traer para sus hijos.
Veamos la siguiente la información al respecto.
3. Presentación de material informativo/audiovisual.
A continuación se puede mostrar al grupo el video: “Los niños en la mira de la psiquiatría”, extracto del Documental “Psiquiatría: Una industria de la muerte”, el cual se encuentra en el siguiente link: [Sitio web para ver en línea: http://www.youtube.com/watch?v=UKzl8GOYleI] Si no se tienen los equipos necesarios para presentar el material audiovisual se puede compartir la siguiente noticia con el grupo:
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SALUD UN DILEMA “ATIPICO”
A UN CRECIENTE NÚMERO DE NIÑOS SE LES ESTÁ PRESCRIBIENDO PODEROSAS DROGAS ANTIPSICÓTICAS. ¿Son seguras?, Nadie lo sabe.
Por ROBERT FARLEY, Escritor del Times Publicado el 29 de Julio de 2007
athy Peck es ambivalente acerca de las drogas que
le dan a su hijo Matthew para ayudarlo a
controlarse.
Los fármacos le ayudan mucho, deja de morder a sus
hermanos y deja de destruir la casa; pero esas drogas son
para tratar la esquizofrenia y el trastorno bipolar de los
adultos. ¿Qué le hacen a su hijo de 7 años?
Más y más padres desconcertados están solicitando a los
doctores les ayuden a apaciguar la agresividad de sus
hijos o a controlar a sus hijos que tienen TDA/H. Y cada
vez más y más doctores están prescribiendo fuertes
drogas antipsicóticas.
En los últimos siete años, el número de niños de Florida, EE.UU. a quienes se les han
prescrito dichas drogas se ha incrementado un 250%. El año pasado, a más de 18.000 niños se les
prescribieron drogas antipsicóticas en el sistema de salud pública Medicaid.
Incluso se las dieron a niños de apenas 3 años. El año pasado se les dieron antipsicóticos a 1.100
niños menores de 6 años, una práctica que les pone en gran riesgo, y que las regulaciones
estatales dicen deben ser usadas solamente en casos extremos.
Estas cifras son tan solo de los niños que tienen asistencia gratuita por parte del Estado, para
personas de escasos recursos y para discapacitados. Miles de niños más que tienen seguros
médicos privados también están tomando antipsicóticos.
Casi llevando una tendencia en espiral ascendente está un tipo de drogas antipsicóticas
denominadas atípicas. Estas drogas surgieron en los años noventa para sustituir los viejos
antipsicóticos como el Haldol y la Torazina, que están muy relacionados con el mal del Parkinson.
Los denominados atípicos fueron desarrollados para tratar la esquizofrenia y la bipolaridad de
los adultos. Pero una vez en el mercado los doctores tienen la posibilidad de prescribírselos a los
niños, y darle otros usos que no han sido aprobados por la FDA (Administración de Alimentos y
Drogas de Estados Unidos).
Casi no existe investigación sobre los efectos adversos a largo plazo que provocan las
poderosas drogas en los cerebros de los niños que están en pleno desarrollo. Mientras más
aprenden los investigadores, menos confiables se están volviendo esos medicamentos.
Al principio fueron promovidas como “drogas maravillosas con pocos e insignificantes efectos
adversos”, pero cada vez existe más evidencia que muestra que causan rápido sobrepeso, diabetes
e incluso la muerte, entre otros problemas.
También son drogas caras. El promedio del costo del año pasado para el seguro popular
americano (Medicaid) fue cerca de $1.800 dólares por cada niño de Florida a quien se le
prescriben antipsicóticos atípicos. En los últimos siete años el costo para los contribuyentes de
Florida aumentaron hasta cerca de un 500%, de $4.7 millones a $27.5 millones de dólares.
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Medicaid y las compañías aseguradoras han alimentado el problema, fomentando el uso de
drogas psiquiátricas puesto que ellas representan una reducción en los costos por ofrecer menos
horas de trabajo de psicoterapia intensiva o terapia ocupacional.
Un factor adicional: Los doctores han sido influenciados por la industria farmacéutica, quienes
han hecho una gran publicidad de aquellos medicamentos.
Según el Dr. Ronald Brown, sea cual fuera la razón del uso desmedido de drogas
psiquiátricas en los niños, las cosas están fuera de todo control. El año pasado el Dr. Brown
encabezó uno de los comités de la Asociación de Psicología Americana para analizar esta
problemática: “El fondo de este problema es que es mucho mayor el uso de la medicación
psiquiátrica que la evidencia de que sea segura y efectiva”, declaró Brown.
“Lo que la gente debe hacer es aquello que está dirigido a lo que es mejor para los niños, en lugar
de procurar llenarse los bolsillos. Pero a los niños no se les pide su opinión”.
Una vez visto el video o leída la noticia, abra la ronda de comentarios en base a la pregunta: “¿qué les
pareció lo que acabamos de ver/leer?”
Aclaración: Se recomienda explicar que la cinta (o la noticia) está contextualizada en Estados Unidos
debido a que es uno de los países donde el tema del diagnóstico de Déficit Atencional/Hiperactividad ha
constituido un tema de interés público, debido a las diversas demandas judiciales que muchas personas
han interpuesto a psiquiatras implicados en las graves consecuencias de administración de fármacos en
niños y niñas.
4. Cierre de la primera sesión.
Realice un resumen de los comentarios de las personas en relación al documental/noticia y
ponga énfasis en la diversidad de enfoques para comprender el TDA/H expuesto en la primera
actividad. Se recomienda explicitar que las dudas que no han sido resueltas en esta primera sesión
serán de todas maneras abordadas en el desarrollo del Taller, de acuerdo con el tema ha tratar en cada
una de las tres sesiones siguientes.
Luego de ello, se sugiere hacer el cierre de esta primera sesión con las siguientes palabras:
"Como hemos visto a lo largo de esta primera sesión, el TDA/H representa un
problema muy de moda en la actualidad, su difusión en los medios de comunicación y
presencia en la vida cotidiana de las personas genera mucha preocupación e interés
en los padres cuando sus hijos presentan dificultades en la escuela y son alertados
por los profesores sobre su posible presencia.
Pues bien, existen muchas formas distintas de comprender el TDA/H y es
posible encontrar muchas opiniones contradictorias entre los distintos especialistas
al respecto. Representa un tema polémico, de opinión pública y debate científico y
ciudadano en muchos países del mundo, como Estados Unidos. Como vimos en el
video o noticia, ante la existencia de cualquier problema o dificultad con nuestro hijo
el camino fácil de la medicamentación no es siempre el mejor camino. No hay recetas
mágicas ni soluciones inmediatas para abordar el problema puntual que puedan
tener nuestros hijos en la Escuela. Este taller tiene el objetivo de entregar soluciones
prácticas que nos permitan comprender lo que ocurre con nuestros hijos y abordarlo
de la mejor forma posible, sin utilizar peligrosas drogas que pueden poner en riesgo
su salud y bienestar"
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1. Introducción
Comience la sesión señalando que el tema a tratar esta vez tiene relación con la "Realidad actual
del Déficit Atencional/Hiperactividad en Chile”, luego lea los objetivos que se esperan cumplir en esta
segunda sesión y dé inicio a la presentación de los temas con un breve resumen de la sesión anterior:
2. Circuito de detección, diagnóstico y forma común tratamiento de TDA/H en Chile:
Institución educativa: Observación del comportamiento del niño en la sala de clases por parte del profesor.
COSAM- CESFAM: Diagnóstico de TDA/H por parte del profesional a cargo (psicólogo, psiquiatra, etc.).
Tratamiento farmacológico
Comunicación a los padres y exigencia de llevar al alumno al psiquiatra, psicólogo o neurólogo debido a su comportamiento.
Fig. 1.1 Circuito de detección, diagnóstico y forma común de tratamiento de TDA-H en Chile.
Segunda sesión
Tema: "Realidad actual del Déficit Atencional/Hiperactividad en Chile"
Objetivos:
- Informar acerca del circuito de detección, diagnóstico y forma común de tratamiento
de TDA/H en Chile.
- Informar sobre aspectos Legales, Normativas y Derechos del Ministerio de Educación
en torno al diagnóstico de Déficit Atencional/Hiperactividad.
- Informar sobre las Políticas públicas en Salud mental en el tratamiento de TDA/H.
"Como vimos la sesión anterior, el TDA/H representa un tema complejo y
polémico. Complejo porque puede ser comprendido de diversas maneras de acuerdo al
enfoque que tengamos para observar el fenómeno, y polémico porque la forma más
común de tratamiento es la medicamentación psiquiátrica, que representa un grave
riesgo para el bienestar y la salud de niños y niñas”
15
En base a la Figura 1.1, entregue la siguiente información acerca del circuito de detección,
diagnóstico y tratamiento del “Déficit Atencional/Hiperactividad” en nuestro país:
a) ¿Cómo se detecta el TDA/H en los niños?
Generalmente ocurre de la siguiente forma: el profesor en la sala de clases observa
la conducta de un niño tal vez inquieto, desordenado, un tanto distraído, que no realiza
las tareas o interrumpe la clase parándose del asiento. Siendo esta conducta reiterada o
problemática, el profesor llama la atención de los padres acerca de la forma de
comportarse del niño, indicando que “sería bueno” o “es necesario” que el niño visite un
especialista para que lo evalúe y ayude, sugiriendo, muchas veces, la posible existencia
de TDA/H en el niño/a.
Los padres, preocupados por el comportamiento de su hijo o presionados por el
profesor para que lo lleve a ver a un especialista, piden una hora a un neurólogo,
psiquiatra infantil o psicólogo particular, o acuden al CESFAM o COSAM más cercano a
su domicilio. Aquí el niño puede ser evaluado por una serie de profesionales: médicos,
psicólogos, psicopedagogos, etc; estableciendo sin una evaluación mayor, en la gran
mayoría de los casos sólo por observación de su conducta, el diagnóstico de TDA/H y
recetando el uso de tratamiento farmacológico como mágica solución al problema. El
niño estando ahora medicado vuelve a clases. Los padres y el profesor se quedan
tranquilos al saber que el niño está siendo tratado.
b) ¿Cómo se establece el diagnóstico de TDA/H?
El diagnóstico de TDA/H se establece en base a la evaluación directa o indirecta del
comportamiento del niño, por medio de una entrevista con los padres, la aplicación de
un cuestionario a profesores o por medio de exámenes neurológicos. Ninguno de estos
exámenes y evaluaciones son completamente científicos, objetivos y confiables, por ello,
es importante que usted pida la opinión de más de un especialista. La Psiquiatría y la
Psicología distingue tres modalidades de diagnóstico: por el predominio de desatención,
por el predominio de hiperactividad e impulsividad, o de tipo combinado.
Para realizar el diagnóstico de TDA/H es estrictamente necesario que los
“síntomas” característicos de este supuesto cuadro psiquiátrico estén presentes en más
de un contexto, es decir, tanto en el colegio como en la casa. Sin embargo, casi todos los
criterios para establecer el diagnóstico están referidos al comportamiento del niño en el
entorno escolar, como incapacidad para permanecer sentado, no prestar atención al
profesor o no finalizar las tareas escolares. En la práctica, el diagnóstico de TDA/H se
está constituyendo en mero trámite al interior de las instituciones de salud, tomando en
cuenta sólo algunos antecedentes aportados por el profesor y sin ser complementada
dicha información con cuestionarios estandarizados o con exámenes neurológicos, que a
su vez, no representan instrumentos válidos científicamente para realizar el diagnóstico.
Como hoy en día está muy de moda el diagnóstico de TDA/H, en la gran mayoría de
los/as niños/as que son etiquetados de esa forma, se debe a cosas muy puntuales y
simples como pararse en clases, perder útiles, no terminar las tareas, ser inquietos,
aburrirse en clases, etc. comportamientos que son normales en muchos niños y niñas de
16
acuerdo a su nivel de madurez y edad, los cuales al ser sobredimensionados se
interpretan y son etiquetados como “comportamientos anormales”.
En definitiva, muchas dificultades específicas de los/as niños/as para adaptarse al
entorno escolar están siendo considerados hoy en día como síntomas de Déficit
Atencional y/o Hiperactividad, por ello muchos representantes de la institución escolar
aparecen como los principales promotores del diagnóstico de TDA/H en los niños/as.
En base a lo señalado anteriormente, mencione la importancia de conocer y estar informado
respecto a la temática del TDA/H:
A continuación comparta con el grupo la siguiente información y explíqueles que corresponde al
segundo objetivo de la clase, el cual está orientado a informar acerca de aspectos legales, normativas y
derechos en torno al TDA/H.
3. Aspectos Legales, Normativas y Derechos del Ministerio de Educación en torno al
diagnóstico de Déficit Atencional/Hiperactividad
El sobrediagnóstico de TDA/H en las Escuelas de nuestro país ha generado que el Ministerio de
Educación se esté encargando de la problemática en dos formas distintas: por un lado, entregando
dinero en forma de subvención a establecimientos que educan a alumnos diagnosticados con TDA/H
(Decreto 170) y por otra parte informando a los padres y apoderados acerca de los derechos de sus hijos
para que no sean estigmatizados ni discriminados en base a ese diagnóstico en las instituciones
educativas de nuestro país (Guía Normas y Derechos para Escolares/Guía Déficit Atencional en la
Escuela).
a) ¿Qué es el Decreto 170?
El decreto 170 fue puesto en vigencia el año 2010 y constituye un cuerpo de normas
legales relacionadas a los alumnos con necesidades educativas especiales transitorias y
permanentes, que serán beneficiarios de las subvenciones para educación especial en
escuelas con programas de Integración Escolar.
Esta normativa legal, establece los requisitos, los instrumentos, las pruebas
diagnósticas y el perfil de los profesionales competentes para identificar a este tipo de
alumnos. Entre las necesidades educativas especiales de carácter transitorio, que
financia la subvención, encontramos el Déficit Atencional con y sin Hiperactividad. De
esta manera, esta normativa legal establece la entrega de una subvención estatal (dinero
"De acuerdo a las últimas encuestas realizadas en nuestro país, las tasas de
diagnóstico de TDA/H han aumentado de manera progresiva en el último tiempo.
Es importante que los padres y apoderados conozcan por un lado, los aspectos
legales, normativas y derechos que ha establecido el Ministerio de Educación en
relación al diagnóstico de Déficit Atencional/Hiperactividad en los niños y por otra
parte, las políticas públicas en Salud mental en el tratamiento de TDA/H".
17
fiscal) a establecimientos subvencionados que cuentan con Programas de Integración
Escolar y educan a niños diagnosticados con TDA/H.
b) ¿Cuál es el procedimiento que establece el Decreto 170 para obtener la subvención
escolar en casos de TDA/H?
El Decreto 170 establece que el proceso de obtención de la subvención comienza
con la evaluación diagnóstica del alumno. Se inicia un proceso de detección el cual es
realizado en primera instancia por el profesor y luego por la derivación a algún
especialista. La normativa establece que el proceso de diagnóstico debe considerar un
proceso de evaluación integral donde se exige una prueba médica y una psicopedagógica.
Al respecto, los padres y apoderados deben corroborar que se realicen ambas
evaluaciones y no sólo la médica. Muchas instituciones educativas promueven la
derivación al neurólogo y la alternativa fácil de la medicación, perjudicando el
conocimiento en torno al tipo de necesidades educativas que el niño tiene y los
respectivos apoyos que requiere, ésta forma de trabajar con el niño proviene del apoyo
del psicólogo educacional y psicopedagogo que deben estar en los establecimientos
educacionales.
c) ¿Qué deberes y derechos deben exigir que se cumplan los padres y apoderados?
El Artículo 10 del Decreto 170 establece que los sostenedores de los
establecimientos escolares que eduquen a niños con Déficit Atencional/Hiperactividad
deberán renovar la subvención cada dos años por medio de una evaluación que confirme
el diagnóstico de TDA/H que dio lugar al pago de la subvención. Este largo plazo de
tiempo para la renovación de la subvención permite que muchos establecimientos
educacionales no se hagan cargo de un adecuado tratamiento y correcta evaluación de los
progresos del niño en relación a su dificultad inicial. Por ello, es importante que los
padres y apoderados de los alumnos fiscalicen la utilización correcta de la totalidad de
los recursos financieros entregados por el Estado a los colegios con programas de
Integración Escolar (ya que sólo las instituciones educativas con ese programa pueden
cobrar la subvención por necesidades educativas especiales) en los siguientes derechos y
deberes que la normativa establece:
- Contratación de recursos humanos especializados (psicólogos y psicopedagogos).
- Coordinación, trabajo colaborativo y evaluación del programa de Integración
Escolar. Esto contempla la asignación de 3 horas cronológicas para los profesores de
educación regular para la planificación, evaluación y seguimiento de este programa,
incluyendo en estos procesos a la familia.
- Capacitación y perfeccionamiento sostenido orientado al desarrollo profesional
de los docentes y otros miembros de la comunidad educativa, como mínimo una vez al
año, con el propósito de mejorar la calidad de las respuestas educativas a la diversidad
del estudiantado.
- Provisión de medios y recursos materiales educativos que faciliten la
participación, la autonomía y progreso en los aprendizajes de los y las estudiantes.
18
- Incluir como máximo 5 estudiantes con necesidades educativas especiales por
curso (por ejemplo Déficit Atencional).
- Planificación de los profesionales competentes en el desarrollo de las siguientes
acciones: apoyo a los estudiantes en la sala de clases; acciones de planificación,
evaluación, preparación de materiales educativos y otros, en colaboración con el o los
profesores de la educación regular; trabajo con el alumno de forma individual o en
grupos pequeños, con la familia, con otros profesionales, y con el equipo directivo del
establecimiento educacional.
- El Programa de Integración Escolar debe establecer sistemas de información y de
participación dirigidos a la familia y/o a los apoderados, de manera de mantenerlos
informados acerca de las los progresos y resultados en los aprendizajes que han
alcanzado sus hijos, así como las metodologías y estrategias de apoyo que se requieren de
la familia.
-El Programa de Integración Escolar debe contar con un sistema de evaluación y
seguimiento por establecimiento de las distintas acciones realizadas. Esta información
debe ser sistematizada a través de un “Informe Técnico de Evaluación Anual”, que
deberá entregarse al Departamento Provincial de Educación respectivo, al Consejo
Escolar y estar disponible para las familias de los estudiantes que presentan necesidades
educativas especiales, a lo menos una vez al año, antes del 30 de Enero de cada año.
Aclaración: Un Decreto constituye un cuerpo de normativas legales que emanan desde el poder
ejecutivo (representado por el presidente de la república y sus ministros) teniendo la posibilidad de ser
reconocido por la Contraloría General de la República para ser puesto en vigencia. De esta forma, un
Decreto no pasa por votación legislativa o consulta ciudadana.
Luego de leer la información anterior diríjase al grupo y presente la siguiente problematización
al respecto:
"Desde que entró en vigencia el Decreto 170 han aumentado considerablemente
el número de alumnos diagnosticados con TDA/H. Esto porque la normativa
establece que el proceso de obtención de la subvención comienza con la evaluación
diagnóstica del alumno y ésta puede ser realizada por una amplia serie de
profesionales acreditados (puede ser un pediatra, un psiquiatra, un médico
neurólogo, un psicólogo, un profesor de educación diferencial o un psicopedagogo)
los cuales establecen en la mayoría de los casos de Déficit Atencional/Hiperactividad
una derivación médica a los servicios de salud mental, culminando generalmente en
la medicamentación psiquiátrica como tratamiento, dejando de lado o en un segundo
plano, cualquier medida de abordaje en el contexto educativo donde el niño se
desenvuelve
¿Creen ustedes que la entrega de dinero por parte del Estado a establecimientos
educacionales con Programas de Integración Escolar, donde es posible encontrar
niños diagnosticados con TDA/H, puede generar un mayor sobre-diagnóstico?, ¿Se
utilizarán real y eficientemente al interior de las instituciones educativas los
recursos económicos entregados por el Estado para mejorar las prácticas
pedagógicas y así ayudar a los niños con necesidades educativas distintas, tal como
es definido el TDA/H?,¿La entrega de dinero es una solución o forma parte del
problema?"
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A partir de la problematización anterior incentive a los miembros del grupo a comentar acerca
del tema expuesto. Se sugiere que pida la opinión de los integrantes en relación a las últimas preguntas
formuladas. Posteriormente comparta la siguiente información y señale que también se trata de
normativas y derechos que establece el Ministerio de Educación (MINEDUC) y que es muy importante
tener en cuenta:
La Ley General de Educación establece que los/as niños/as tienen derecho a recibir
una educación que les ofrezca oportunidades para su formación y desarrollo integral; a
recibir una atención adecuada y oportuna, en el caso de tener necesidades educativas
especiales; a no ser discriminados arbitrariamente; a estudiar en un ambiente tolerante
y de respeto mutuo, a expresar su opinión y a que se respete su integridad física, y moral,
no pudiendo ser objeto de tratos vejatorios o degradantes y de maltratos psicológicos.
La educación es un derecho de todas las personas. Corresponde preferentemente a
los padres el derecho y el deber de educar a sus hijos; al Estado, el deber de otorgar
especial protección al ejercicio de este derecho y, en general, a la comunidad, el deber de
contribuir al desarrollo y perfeccionamiento de la educación. Hay dos documentos del Ministerio de Educación que los padres y apoderados deben conocer
para estar informados acerca de la temática del TDA/H y poder defender el derecho a la educación de
sus hijos. Estos documentos son la “Guía Normas y Derechos para Escolares” y la “Guía Déficit
Atencional en la Escuela” las cuales mencionan, entre otras cosas, lo siguiente en relación al TDA/H:
Para entender el concepto de "Déficit Atencional" es necesario tener en cuenta que
parte normal del desarrollo de los niños es presentar conductas como falta de atención,
exceso de actividad o impulsividad. Sin embargo, algunos colegios tienden a confundir
estas conductas normales con un diagnóstico de Déficit Atencional/Hiperactividad, lo
que ha llevado a sobre estimar el número de niños(as)con este problema y a la utilización
excesiva de fármacos, con los riesgos que esto conlleva.
Por esta razón, es importante que la escuela y la familia se informen.
a) ¿Puede un establecimiento negarle o cancelarle la matrícula a un/a niño/a por tener
un Déficit Atencional?
No. El que un/a niño/a presente déficit atencional no impide su acceso y/o
permanencia en un establecimiento educacional. Tampoco puede implicar ninguna
forma de discriminación y/o maltrato en su contra. La Constitución Política de la
República, establece que los hombres nacen libres e iguales en dignidad y derechos
(Artículo 1º), consagrando además la igualdad ante la ley y el derecho a la educación
(Artículo 19º, Nº 2 y Nº10).
b) ¿Corresponde enviar a un/a niño/a con Déficit Atencional-Hiperactividad a una
escuela especial?
Los/as niños/as con déficit atencional tienen por lo general una inteligencia
normal, por lo cual deben asistir a establecimientos de educación regular, no
correspondiendo enviarlos a escuelas especiales.
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c) ¿Puede un establecimiento condicionar la matrícula de un/a niño/a con Déficit
Atencional al uso de fármacos?
El establecimiento educacional no puede exigir el uso de fármacos. Estos deben ser
indicados y supervisados exclusivamente por el médico especialista, en los casos que
corresponda.
d) ¿Qué apoyo deben brindarle los profesores?
Los profesores no están facultados para realizar un diagnóstico de Déficit
Atencional/Hiperactividad ni establecer un tratamiento farmacológico, sin embargo,
pueden utilizar diversas estrategias en el apoyo de sus alumnos con TDA/H:
- Adaptar la metodología del currículo regular a las necesidades y capacidades del
niño/a.
- De ser necesaria, realizar una evaluación diferenciada.
- Coordinarse con los padres y especialistas (psicólogo, psicopedagogo, etc., que trabajen
en el establecimiento educacional) respecto del manejo y tratamiento del niño(a)
- Utilizar técnicas de manejo conductual sugeridas por el o los especialistas tratantes.
- Estimular la aceptación e integración de todos los(as) niños(as) por parte de sus
compañeros y demás miembros de la escuela, evitando que sean víctimas de
discriminación y/o maltrato.
A partir de lo anterior, se deduce que idealmente los/as profesores/as deben agotar todas estas
posibilidades antes de derivar al niño/a a un especialista externo al establecimiento educacional. En
este sentido, la derivación del alumno a un especialista debe ser la última medida a utilizar y ésta
además debe ser conversada en detalle con los apoderados. Además es muy importante la coordinación
que puedan establecer con los apoderados en el trabajo con los niños y niñas, integrándolos en el
conocimiento de lo que sucede con sus hijos y en los progresos que estos van desarrollando.
Luego de leer la información anterior comente lo siguiente:
"El Ministerio de Educación establece que no se puede condicionar la matrícula a
los/as alumno/as para obligarlo/as a tomar medicamentos, ni exigir exámenes
neurológicos, psicológicos o psiquiátricos para condicionar su permanencia en el
establecimiento, a la vez, promueve utilizar diversas estrategias de apoyo y prácticas
pedagógicas diferenciadas que atiendan a las necesidades y capacidades del niño.
Las prácticas pedagógicas están vinculadas a la promoción, fomento,
activación y mejora de las habilidades psicomotrices (relativas a la movilidad),
cognitivas (relativas al pensamiento) y conductuales. Cabe señalar que dichas
capacidades están condicionadas a la etapa del desarrollo en la que se encuentre el/la
niño/a y de acuerdo con ello el/la profesor/a debiera contribuir a potenciarlas, en lo
cual son fundamentales las variables del entorno educacional.
Considerando lo anterior, surgen las siguientes preguntas: ¿Se les comunica a los
padres y apoderados estos derechos?, ¿Cuántos padres y apoderados son obligados
por las instituciones escolares a llevar a sus hijos/as a ver especialistas externos al
establecimiento y, muchas veces, presionados a medicar a los niños/as evitando así la
responsabilidad de abordar el problema desde el punto de vista educativo?"
21
4. Políticas Públicas en Salud Mental en el tratamiento del TDA/H.
Señale que otro de los temas importantes que es importante conocer tiene que ver con las
políticas públicas en Salud mental en el tratamiento del Déficit Atencional/Hiperactividad:
De acuerdo a lo dicho anteriormente, mencione la siguiente información consignada en el
documento aludido:
a) ¿Qué establece la Guía Clínica como medida de abordaje y tratamiento del TDA/H?
La Guía Clínica del MINSAL en torno al TDA/H recomienda la realización de
intervenciones psicosociales, previo a la decisión de un tratamiento farmacológico. Se
propone implementar en primer lugar un plan de tratamiento multidisciplinario, esta
estrategia incluye la combinación de intervenciones psicosociales con los niños/as, sus
familias y la comunidad escolar en distintas actividades tales como:
- Psicoeducación (entrega de información a los apoderados relacionada con el déficit
atencional/hiperactividad, la cual espera ser de utilidad en la relación que establezcan
con sus hijo/a).
- Entrenamiento en habilidades parentales (desarrollo de habilidades en los padres para
tratar la conducta de un/a niño/a diagnosticado con TDA/H).
- Entrenamiento en habilidades sociales para los niños/as.
- Intervenciones educacionales (rol del profesor, optimizar los recursos disponibles en
función de las necesidades de aprendizaje de los distintos niños).
- Actividades deportivas y recreativas.
- Grupos de autoayuda (reunión de apoderados enfocadas a compartir experiencias y
construir estrategias de resolución a conflictos comunes).
b) Respecto al tratamiento farmacológico, ¿Qué menciona la Guía Clínica?
La Guía Clínica del MINSAL establece que el tratamiento farmacológico de mayor
evidencia y eficacia para el TDA/H es aquel que utiliza drogas psicoestimulantes como el
Metilfenidato y Anfetamina. No obstante, también se señala que si el tratamiento con
medicamentos lleva más de un año debe interrumpirse dadas las probabilidades de
secuelas a largo plazo, esto porque el año 2009, el Instituto de Salud Pública de nuestro
país advierte a la ciudadanía, a partir de un comunicado enviado por la Agencia Europea
de Medicamentos (EMEA), sobre los posibles riesgos asociados a la administración de
"La política de Estado que comprende el TDA/H como problemática de salud mental
en nuestro país está consignada en la Guía Clínica "Atención integral de niñas/niños
y adolescentes con Trastorno Hipercinético/Trastorno de la Atención" del Ministerio
de Salud (MINSAL), puesto en circulación en el año 2008.
Este documento corresponde a una normativa técnica que regula los procedimientos
y atenciones de los profesionales de la salud respecto al diagnóstico y tratamiento de
TDA/H”
22
medicamentos con Metilfenidato (droga psicoestimulante que corresponde al
componente activo del famoso fármaco Ritalín) señalando efectos colaterales tales como:
dificultades cardiovasculares, cerebrovasculares, problemas psiquiátricos, reducción del
crecimiento y maduración sexual.
En la Guía Clínica también se advierte que debe monitorearse la presión sanguínea
y frecuencia cardíaca, altura y peso del/a niño/a, esto porque no existe evidencia que
apoye un rango determinado de dosis terapéutica en usuarios con TDA/H. Ello implica
que cada niño, niña o adolescente tiene una curva única de dosis respuesta. Esto quiere
decir que el médico profesional a cargo irá probando la entrega de medicamentos con
el/la niño/a hasta dar con la dosis correcta, en muchos casos aumentando la dosis al no
percibir respuesta al tratamiento. Por otra parte, se recomienda usar la administración
del fármaco en un programa de lunes a viernes, con suspensión en el período de
vacaciones; esto muestra cómo el uso y efectividad del fármaco está relacionado a la
adecuación del comportamiento del niño en la sala de clases, ya que es aquí y no en su
hogar donde justamente constituye un “problema”, por ejemplo.
Enfatice lo contradictorio de la información entregada por la Guía Clínica del Ministerio de
Salud y el Instituto de Salud pública, señalando que además ambas instituciones son promotoras y
responsables de la Salud de la población. Como una forma de dar importancia a esta contradicción
formule la siguiente pregunta:
Luego de los comentarios de los participantes agregue lo siguiente:
5. Cierre de la segunda sesión
Se sugiere realizar un resumen de los comentarios de las personas y los temas abordados en esta
sesión. Luego de ello, se recomienda hacer el cierre de esta segunda sesión con las siguientes palabras:
“¿Por qué el Ministerio de Salud continúa apoyando el tratamiento
farmacológico en niños/as diagnosticados con TDA/H, si el Instituto de Salud Pública
de nuestro país ha advertido sobre los posibles riesgos asociados?”, ¿Por qué se
propone un tratamiento multidisciplinario y psicosocial del TDA/H cuando la forma
más común y reconocida de tratamiento es la entrega de fármacos?, ¿Por qué se
sigue promoviendo el tratamiento farmacológico si se tienen antecedentes de los
posibles efectos graves de su uso y administración?, ¿Por qué se recomienda
administrar el fármaco de lunes a viernes?, ¿Para quién entonces constituye
realmente un problema el comportamiento de los niños/as?, ¿Se les informa a los
padres, a los profesores y a la ciudadanía en general, de los posibles efectos graves
de la medicación psiquiátrica con metilfenidato en niños y niñas?”.
"El diagnóstico y tratamiento del TDA/H constituye un tema polémico, en
relación al uso de medicación psiquiátrica existe información contradictoria en los
organismos públicos de Salud mental de nuestro país respecto a los posibles efectos
positivos y a los peligrosos riesgos. Como padres debemos estar informados antes de
tomar cualquier decisión, como hemos venido revisando, el camino fácil de la
medicación no es siempre el mejor camino. No se trata de atribuir una mala voluntad
a los profesionales de la salud, pero es importante que ustedes conozcan cuales son
los riesgos asociados al tratamiento farmacológico y puedan contar con otras
alternativas".
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Comentarios: _________________________________________________________________
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"Del mismo modo, es importante estar informados de los aspectos legales,
normativas y derechos, por parte del Ministerio de Educación y las Políticas
públicas por parte del Ministerio de Salud en torno al diagnóstico y tratamiento de
TDA/H. Sólo manteniéndonos informados e informando a los demás podemos
defender nuestros derechos y los de nuestros hijos. Los padres siempre deben ser los
primeros en defender a sus hijos y deben tener la última palabra. Ahora ustedes
tienen las herramientas para elegir defender los derechos de sus hijos".
24
1. Introducción.
Comience la clase señalando que el tema a abordar se titula: “Mitos y realidades en torno al
Déficit Atencional/Hiperactividad”. A continuación realice un breve resumen de la sesión anterior, el
cual puede hacerlo de la siguiente manera:
Posteriormente introduzca el tema de esta clase con un breve recorrido por las sesiones
anteriores, a través del cual se recojan los temas ya vistos y se integre así la temática a abordar. Se
sugiere hacerlo de la siguiente forma:
Tercera sesión
Tema: "Mitos y realidades en torno al Déficit Atencional/Hiperactividad"
Objetivos:
- Problematizar la explicación biológica del TDA/H y el uso de medicamentos como
forma de tratamiento.
- Comprender la problemática del TDA/H en el contexto psicosocial de la familia y al
interior de la institución educativa.
"Como vimos la sesión anterior, es importante que como padres y ciudadanos
estemos informados de las Políticas Públicas en Salud Mental y las normativas
legales del Ministerio de Educación en torno al TDA/H. Una de las cosas más
importantes que revisamos son los derechos que como padres debemos hacer valer
para que nuestros hijos/as no sean discriminados de las instituciones educativas por
ser diagnosticados con TDA/H, ni sean presionados a tomar medicamentos para
poder asistir a clases, ya que todos los niños/as tienen derecho a educarse libres de
presiones y de formas de discriminación; y nosotros como padres debemos velar por
el cumplimiento de este derecho.
“Como vimos en la primera sesión del taller, el TDA/H puede ser comprendido
de diversas maneras dependiendo del enfoque o la perspectiva con que abordemos el
problema. Posteriormente cuestionamos la utilización de medicamentos como forma
de tratamiento en cuanto representa un riesgo para la salud de los niños/as. Por otro
lado, hemos dado una mirada crítica a la realidad actual del TDA/H en Chile. Ahora
es momento que nos preguntemos por los mitos asociados al TDA/H”
25
2. El mito del TDA/H como enfermedad mental.
Exponga al grupo la siguiente información y explíqueles que ésta se enmarca en la idea del “Mito
del TDA/H como enfermedad mental”.
a) ¿Es el TDA/H una enfermedad mental?
Hemos visto que muchos niños/as se aburren o son inquietos en la sala de clases,
también muchos niños/as no prestan atención y pareciera que andan en las nubes, sin
embargo, que los niños actúen de esa forma no representa necesariamente síntomas de
una enfermedad mental sino simplemente actitudes que develan los intereses y
motivaciones distintas de cada niño/a. Es importante, por lo tanto, comprender la
diferencia que existe entre decir que un/a niño/a tiene problemas escolares, de
rendimiento o de adaptación a la institución escolar; y decir que dicho/a niño/a tiene una
enfermedad mental. En el primer caso, estamos hablando de un problema pedagógico,
que tiene que resolverlo la institución educativa en conjunto con los padres y el/la
niño/a, en el segundo caso estamos hablando de un problema de salud mental que
afectaría exclusivamente al niño y cuya responsabilidad en este caso recaería en la
persona de un profesional de la salud mental y no en la comunidad escolar.
Entendiendo lo que implica esta diferencia, es necesario que ustedes sepan que no
existe ninguna prueba científica que haya demostrado de manera científica y confiable
que los comportamientos y actitudes asociadas al diagnóstico de TDA/H tienen un origen
cerebral o causa biológica, por lo que no puede ser entendido bajo ninguna circunstancia
como una enfermedad mental. Frente a esta falta de evidencia, comprender el TDA/H
como un problema de salud y promover el uso de fármacos como forma de tratamiento
no se justifica bajo ninguna argumentación científica válida comprobada, por lo cual, la
decisión acerca de la intervención profesional y administración de medicamentos, debe
quedar bajo la exclusiva responsabilidad de los padres asumiendo los posibles riesgos
que ello implica.
En definitiva, el TDA/H no constituye un asunto médico, una enfermedad mental,
sin embargo, el problema que subyace al diagnóstico puede ser un problema pedagógico,
en ese caso la institución educativa debe asumir su responsabilidad en lograr adaptar sus
metodologías de enseñanza a las diferentes necesidades de los/as niños/as, entre otras
cosas que vamos a ir comentando.
b) ¿Qué problemas tienen los niños diagnosticados con TDA/H en su atención?
Ningún estudio ha demostrado que exista una falla específica en la atención de los
niños diagnosticados con TDA/H, sino que más bien se trata en muchos casos
simplemente de una dificultad para focalizar la atención en los estímulos que exige un
profesor o cualquier otro adulto en un contexto controlado por normas definidas por los
adultos sin atender los intereses de los/as niños/as. Esto explica que muchos/as niños/as
que han sido diagnosticados sean capaces de estar horas frente al computador o jugando
“Play Station”, mantener una conversación coherente por varios minutos o comprender
toda la historia del capítulo de sus monos animados favoritos.
26
Del mismo modo, no existe ninguna evidencia científica que avale la relación entre
desatención, impulsividad o hiperactividad con un posible fracaso escolar o conductas
antisociales a futuro, como consecuencia de no ser “tratadas” a tiempo estas conductas o
actitudes.
c) ¿Mejoran los niños su rendimiento escolar, o su comportamiento, o su capacidad de
dirigir la atención, cuando consumen fármacos para tratar el TDA/H?
El metilfenidato, componente activo de los medicamentos más utilizados en el
tratamiento del TDA/H, es un estimulante del sistema nervioso, esto significa que
contribuye a aumentar la actividad del cerebro, produciendo evidentes cambios en el
comportamiento y muchas consecuencias en el mundo interno del niño que no son
visibles para los padres o los profesores. Como consecuencia de la administración del
fármaco, el/la niño/a suele regular su comportamiento, reduce su inquietud motora,
pero no así su actividad mental. El/la niño/a eleva su estado de alerta, pero no implica
necesariamente que vaya a concentrarse mágicamente en los contenidos de la clase o en
lo que expone el profesor. Lo que suele suceder es que nunca se evalúa el efecto del
medicamento a nivel de lo que siente o experimenta internamente el/la niño/a, sino que
el simple cambio en la conducta, es decir, el hecho de que comience a “portarse mejor” es
interpretado por los profesores y por los profesionales de la salud mental como una
mejoría. En el fondo, el problema se soluciona parcialmente para el profesor debido a
que el/la niño/a ya no interrumpe el desarrollo de la clase, pero no hay evidencia
científica de que el medicamento ayude a mejorar la concentración de los niños ni menos
que contribuya a mejorar el rendimiento académico, en cambio, si hay evidencia
científica de que el uso de medicamentos para tratar el TDA/H puede generar una serie
de consecuencias negativas para la salud de los niños/as a mediano y largo plazo,
La siguiente pregunta es opcional, debido a que la argumentación que aquí se da es de una
mayor complejidad. Se recomienda utilizar esta información sólo si la pregunta es realizada
explícitamente por uno de los participantes del taller.
…Pero si el “remedio” ayuda algunas veces a que el niño se porte bien ¿Entonces sí
es cierto que se portaba mal por una falla en su cerebro?
No, en pocas ocasiones el niño medicado con metilfenidato suele reducir su
actividad motora durante algunas horas. Lo curioso es que nadie sabe cómo actúa
específicamente el fármaco en el cerebro ni por qué razón altera la conducta de los niños
diagnosticados con TDA/H, pero el hecho de que esto ocurra es usado por los/as
profesionales de la salud mental como argumento para confirmar el diagnóstico y para
sostener que el problema del/a niño/a era efectivamente un trastorno de origen
biológico.
Es importante que notemos la trampa en esta argumentación, para ello haremos la
siguiente analogía:
Imaginemos que quisiéramos aumentar nuestra fuerza física y para ello un médico
nos recomienda tomar esteroides. Como consecuencia “nos salen más músculos”, frente
27
a lo cual el médico nos hace creer que el problema de mi debilidad física se debía
originalmente a una “falta de esteroides”. Sin embargo, cualquier profesor de educación
física razonable nos hubiera dicho que en realidad nuestra debilidad física es un simple
problema de falta de ejercicio físico, que podría haberse superado con un entrenamiento
adecuado que se ajustara a las características especiales de mi organismo.
Como podemos darnos cuenta, el famoso Ritalín cumple la misma función que
cumplen los esteroides en el ejemplo anterior. Parece ser una solución rápida frente a un
problema concreto, pero que sin embargo representa un gran riesgo para la salud en el
largo plazo, y que además no soluciona el problema de fondo. Tal cual como el aumento
de la musculatura no significa que se tenga más fuerza, el mantener sentado a un niño en
su silla no significa que éste tenga más facilidades intelectuales para concentrarse y
aprender. Por lo tanto, al igual que el ejemplo que dimos sobre la fuerza física, las
dificultades que pueda tener un niño para concentrarse o aprender en la sala de clases
pueden revertirse a través de un entrenamiento psicopedagógico que se adecue a las
necesidades especiales del niño y a su propio ritmo y forma de aprender, sin tener que
recurrir a tratamientos riesgosos que perturben el funcionamiento de su cerebro y
tengan graves consecuencias para su salud a mediano y largo plazo.
d) ¿Es el Metilfenidato una droga?, ¿Se puede interrumpir su uso de un momento para
otro?
El metilfenidato es un psicoestimulante, o sea, tiene un efecto en el cerebro similar
al que tiene la cocaína y las anfetaminas. En nuestro país se comercializa principalmente
con los nombres de Ritalín, Aradix y Concerta. Se ha comprobado que puede generar
retraso en el crecimiento, tics nerviosos, disminución del apetito, dolores de cabeza,
vómitos, mareos, dolor estomacal, problemas digestivos, cardiovasculares y cerebrales,
entre otras dificultades de salud que están siendo estudiadas. Se ha comprobado también
que puede tener un efecto adictivo a largo plazo, es decir, genera dependencia y puede
llegar a predisponer hacia el consumo de otras sustancias de mayor peligrosidad.
Por los efectos directos que produce el fármaco en el organismo, la interrupción
abrupta del tratamiento farmacológico puede causar consecuencias perjudiciales para el
equilibrio orgánico del/a niño/a. Si usted desea suspender el consumo del medicamento
de su hijo/a debe intentar reducir las dosis progresivamente, siempre bajo la supervisión
de un médico que esté dispuesto a satisfacer la legítima demanda de “desintoxicación”,
solicitud que los padres están en todo su derecho de exigir en base a la información
científica disponible actualmente y que hemos venido revisando.
e) Sumando y restando ¿Para qué sirve y para qué no sirve la pastilla? ¿Es positiva la
administración del medicamento?
Una parte no menor de los niños que son tratados con metilfenidato no
manifiestan ningún cambio evidente como reacción al tratamiento farmacológico.
Cuando esto ocurre, el psiquiatra o neurólogo suele aumentar la dosis del fármaco. Si
usted está de acuerdo con el uso de la medicación en su hijo/a y no hay una respuesta
luego de aumentar la dosis, usted debe exigir que se reevalúe la certeza del diagnóstico.
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Un gran porcentaje de niños/as reacciona positivamente al tratamiento, esto
significa que manifiestan cambios visibles en su comportamiento, por ejemplo, adecuan
su conducta a las normas de la institución escolar y a las exigencias del profesor, etc. sin
embargo, como se señaló anteriormente, estos cambios no implican que se vaya a
solucionar el problema pedagógico de fondo.
Se han encontrado casos en que los niños/as han mejorado parcialmente su
rendimiento escolar luego de someterse al tratamiento con metilfenidato. Sin embargo,
no hay estudios que muestren que estos eventuales cambios en el aprendizaje se deban a
las características farmacológicas de la pastilla. Es más, se ha demostrado que las
posibles mejoras que se atribuyen al uso del medicamento no perduran en el largo plazo.
Es muy probable que la efectividad inmediata que le podamos atribuir a la pastilla
no tenga nada que ver con ésta, sino con otros factores psicológicos y sociales que se
activan paralelamente al uso del medicamento. Suele ocurrir que los profesores y
padres, ya sobrepasados por la incapacidad de controlar la conducta del/a niño/a,
depositan todas sus expectativas en la pastilla y en sus cualidades milagrosas, se sienten
más aliviados sabiendo que están haciendo algo para abordar el problema y como
consecuencia de esto se reducen las tensiones en el ambiente escolar y familiar.
Al ejercerse menos presión sobre el/la niño/a, éste/a se siente más tranquilo/a y
seguro/a, y comienza a subir sus notas y su desempeño. El aspecto negativo de este
proceso es que como no se solucionan los problemas de fondo que actúan como causa de
las dificultades del/la niño/a, tanto en el hogar como en el colegio, esta mejora no se
mantiene por mucho tiempo. Además, se ha comprobado que cuando el/la niño/a logra
mejorar sus notas, los padres y profesores le atribuyen este logro al efecto de la pastilla y
no a su esfuerzo, desincentivando a que éste siga subiendo su rendimiento, no valorando
realmente las capacidades del niño/a en los estudios, etc.
3. El problema del TDA/H y el comportamiento "normal" en la infancia.
Ahora bien, hemos cuestionado la posibilidad de que el TDA/H sea una enfermedad mental de
origen biológico y que los medicamentos utilizados para su tratamiento tengan un efecto positivo en
base a su mecanismo de acción en el organismo. Hemos cuestionado al TDA/H como trastorno mental y
hemos cuestionado la medicación como solución mágica, sin embargo, no podemos desconocer la
posible existencia de un problema, por ejemplo, de adaptación del niño/a a las normas e instrucciones
del entorno escolar. A continuación comparta con el grupo la siguiente reflexión:
Señale al grupo que para comprender cualquier problema en un niño o niña es importante que
podamos responder a las siguientes preguntas. A modo de sugerencia puede detenerse después de cada
respuesta y pedir al grupo su opinión al respecto.
"Ya hemos visto que debido a la diversidad de maneras en que se expresa el
mundo de los niños y la cantidad de factores distintos que pueden afectar su
comportamiento, el diagnóstico de déficit atencional no tiene ninguna utilidad para la
práctica terapeútica, salvo para justificar el uso masivo de medicamentos. Con lo que
nos encontramos detrás del diagnóstico de TDA/H es con innumerables formas de
comportamiento infantil, que van desde la simples diferencias de personalidad,
desinterés o la inquietud propia de ser niño/a, hasta problemas de adaptación más
dignos de preocupación que pueden responder a una diversidad de causas (emocionales,
familiares, intelectuales, contextuales) y a distintas formas de sufrimiento infantil. Por
lo tanto, es necesario entender que no decimos aquí que los niños diagnosticados con
TDA/H no presenten dificultades, ni que esto sea una absoluta mentira de la que no hay
que preocuparse, sino que dicho diagnóstico no tiene utilidad práctica alguna a la hora
de querer resolver el problema y que no hay razón alguna para considerarla una
enfermedad ni tratarla con dañinos fármacos”.
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a) ¿Qué entendemos por comportamiento normal o anormal en un/a niño/a?
Es importante la mirada con la cual abordamos los problemas que tienen que ver
con el desarrollo de nuestros/as hijos/as. Ya hemos mencionado anteriormente que no
existe una enfermedad biológica en los niños diagnosticados con TDA/H sino problemas
de tipo emocional, conductual o pedagógico. Ahora debemos agregar el hecho de que
estas dificultades no deben ser vistas necesariamente como una “anormalidad” de
nuestros hijos/as, sino como una realidad que se produce en la interacción entre el/la
niño/a y su entorno. Esto quiere decir que un mismo comportamiento puede ser
esperable para cierto contexto pero podría ser considerado como inadecuado en otro
lugar. En el caso de los/as niños/as diagnosticados con déficit atencional/hiperactividad,
la mayoría de las veces nos encontramos con que existe una incongruencia entre las
necesidades que presentan los/as niños/as, y las conductas y capacidades que exige la
institución escolar. Daremos un ejemplo para comprender mejor qué significa esto de la
interacción niño(a)/entorno:
Supongamos que un/a niño/a tiene dificultad para movilizarse por sí mismo/a, por
lo que debe desplazarse en una silla de ruedas. Esta condición representa una enorme
desventaja para el/la niño/a al interior de la institución escolar, ya que a menudo los
establecimientos educacionales poseen varios pisos y es necesario estar constantemente
subiendo y bajando escaleras. ¿Pero qué sucedería si el colegio contara con rampas
adecuadas para que los niños en esta condición pudieran desplazarse con mayor
facilidad? Sin duda que las desventajas originales se reducirían al mínimo. Por esta
misma razón, las dificultades para aprender o para adecuarse a la sala de clases son
situaciones que ocurren en un ambiente determinado y deben ser resueltas de manera
creativa y personalizada por la institución educativa completa. De esta manera, en lugar
de decir que un/a niño/a no se adapta al establecimiento escolar, diremos que en muchos
casos es la institución educativa la que no se adapta a las diversas habilidades y
necesidades particulares de los/as alumnos/as, por ello, ésta debe trabajar para acoger a
los/as niños/as y sus diferencias en un ambiente inclusivo y respetuoso.
b) ¿Cómo debe adaptarse entonces la institución escolar a las necesidades de los/as
niños/as?
En primer lugar debemos cambiar nuestra visión del problema desde una mirada
médica hacia una mirada psicosocial. Esto significa que los padres y profesores deberían
dedicarse a evaluar cuáles son las dificultades específicas y particulares de cada niño/a,
para determinar de qué manera se puede potenciar mejor sus habilidades. Es importante
saber en qué está fallando, por qué y para quién implica un problema y si acaso es
necesario buscar alternativas para que esto no constituya una dificultad dentro del
proceso de aprendizaje y crecimiento del/la niño/a.
Los ambientes excesivamente caóticos y poco estructurados alimentan la
inquietud de los/as niños/as ya que no se cuenta con un contexto lo suficientemente
estable como para dirigir la motivación hacia metas claras. Por otra parte, los ambientes
demasiado rígidos y poco contenedores suelen sobre-exigir a los/as niños/as y tratar sus
diferencias y sus conductas espontáneas como anormalidades que hay que eliminar y
30
sancionar. Necesitamos construir contextos escolares democráticos y participativos, que
logren alcanzar una estabilidad y disciplina necesarias pero que posean la flexibilidad
suficiente como para integrar los aspectos que hacen único a cada uno de nuestros/as
hijos/as.
Por último, es necesario considerar el contexto socio-cultural en el que están
insertos los/as niños/as, esto quiere decir que es muy importante que los contenidos de
los clases deben ser transmitidos de una forma tal que puedan ser relevantes para el/la
estudiante y que en la medida de lo posible tenga una utilidad práctica para entender y
actuar en su mundo cotidiano, que respondan a las necesidades de lo que les toca vivir a
diario.
4. Cierre de la tercera sesión
Para finalizar se sugiere realizar un resumen de los comentarios de las personas y los temas
abordados en esta sesión. Luego de ello, se recomienda hacer el cierre de esta segunda sesión con las
siguientes palabras:
Luego puede finalizar con el siguiente mensaje, que resume brevemente los contenidos
abordados en la sesión.
"Frente a esto, es necesario descartar el mito de la enfermedad mental y la
perspectiva médica que plantea el fenómeno del TDA/H como un problema inherente
al niño/a. Es necesario comprender la infancia en nuestro contexto sociocultural y
poner más atención a los sentimientos y perspectivas de los/as propios/as niños/as,
considerando el problema como una relación entre el/la niño/a, sus necesidades,
habilidades y el entorno, atendiendo a sus motivaciones particulares. Por otra
parte, si queremos definir el TDA/H como un problema debemos preguntarnos lo
siguiente: ¿Es normal que un/a niño/a tenga que consumir drogas psiquiátricas
potencialmente peligrosas que alteran su mente y son adictivas para parecer
niños/as normales? Los niños/as son seres humanos que tienen todo el derecho de
esperar protección, cuidado, amor y la oportunidad de alcanzar todo su potencial en
la vida, por eso, es nuestra tarea reconocer sus necesidades, inquietudes, intereses y
motivaciones particulares desde una perspectiva inclusiva, solidaria y comprensiva,
al interior de la institución escolar y con el apoyo de toda la comunidad educativa"
“Falta de motivación, ambientes carentes o pobres de estimulación, falta de
desarrollo del control de los movimientos corporales, falta de estimulación social y
afectiva, nivel de autoestima, falta de autocontrol, ambientes poco estructurados o
desorganizados, ambientes demasiado rígidos y poco contenedores, niños/as sobre-
exigidos, ambientes familiares estresantes, tareas con poca relevancia práctica y
cultural para el/la niño/a, etc. Todas estas razones pueden ser posibles causas del
problema de desadaptación del niño o niña a la institución escolar”.
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Comentarios: _________________________________________________________________
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1. Introducción.
Inicie la clase señalando que el tema a tratar en esta sesión está orientado a recomendaciones y
consejos prácticos en torno al TDA/H. Luego lea los objetivos que serán abordados. Posteriormente
realice un breve resumen de la clase anterior, el cual puede presentarse de la siguiente forma:
Puede explicar que del mismo modo en que no existen pastillas o medicamentos que solucionen
mágicamente los problemas de adaptación de los/as niños/as a la escuela, tampoco existen recetas o
acciones prácticas que en sí mismas vayan a solucionar el problema. Se trata más bien de un proceso,
que puede tomar más o menos tiempo y que puede necesitar una reorganización amplia del ambiente
familiar o escolar. Para los padres, es necesario explicarles que debido a la diversidad de dificultades
que se pueden encontrar detrás del diagnóstico de TDA/H, este taller no puede facilitar consejos
técnicos específicos, ya que sería necesario evaluar la particularidad de cada niño/a, pero sí pretende
Cuarta sesión
Tema: "¿Qué hacer? Recomendaciones y consejos prácticos en torno al TDA/H"
Objetivos:
- Conocer elementos psicoeducativos y algunos consejos prácticos sobre el cuidado y
protección de los niños.
- Compartir experiencias de soluciones y recomendaciones importantes en torno a la
problemática del TDA/H.
"En la sesión pasada mostramos la necesidad de cambiar la forma de percibir
el problema del llamado Déficit Atencional/Hiperactividad. Como vimos, es
necesario comprender que el Déficit Atencional en ningún caso es una enfermedad
mental, ni tampoco un problema cerebral del niño, esto representa un mito muy
difundido en nuestra sociedad que justifica como forma de tratamiento la
medicación psiquiátrica. La realidad del Déficit Atencional es que representa un
conjunto de dificultades concretas que se producen en la interacción entre el niño y
su ambiente. De manera general, puede interpretarse como una desadaptación del
niño/a al contexto escolar, pero también como una desadaptación de la Escuela a las
diferentes necesidades educativas de los niños/as.
Por ello, es necesario entender que es casi imposible en la actualidad, debido a
las implicancias de los cambios socioculturales y tecnológicos de nuestra época, que
los niños y niñas se adapten como antaño a las reglas y normas de la institución
escolar. Por esta razón, nuestra principal tarea como padres es trabajar en conjunto
con la institución educativa para que la adaptación del niño al entorno escolar sea
segura, flexible, inclusiva y respetuosa de sus habilidades, intereses y motivaciones"
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brindar herramientas y consejos prácticos que son necesarios como paso previo a las intervenciones
específicas, ya sea que éstas últimas sean llevadas a cabo con ayuda profesional o por los propios padres
o educadores. Puede explicar lo señalado anteriormente de la siguiente forma:
Como cada niño/a que ha sido diagnosticado con TDA/H tiene dificultades específicas
que pueden responder a causas diferentes, es necesario que abordemos el problema en
distintos niveles, que van desde lo más general y que puede ser útil en la mayoría de los
casos, hasta las alternativas más concretas que deben ser puestas en práctica según la
necesidad de cada niño/a. Este sistema de niveles lo llamaremos “Niveles de acción”.
A continuación señale que los “Niveles de acción” los hemos dividido en los siguientes:
Nivel 1.Comprensión del problema
Nivel 2. Actitud del padre/madre frente al problema
Nivel 3. Recursos presentes en el contexto escolar
Nivel 4. Recursos presentes en el contexto familiar
Nivel 5. Comunicación con el niño
Nivel 6. Técnicas específicas.
Explique qué entenderemos en cada uno de los “niveles de acción” de acuerdo a la información
que aparece a continuación para cada nivel. No olvide que en esta sesión es importante recoger los
aportes del grupo, evaluar cómo acogen lo que se plantea e intentar motivarlos a que participen
activamente compartiendo sus experiencias y las estrategias que a ellos les ha servido y las que no.
Nivel 1: Comprensión del “problema”
Este nivel se refiere al marco general con el que los padres y/o madres tenemos
que entender el carácter del problema. Corresponde en el fondo a cómo nos explicamos
en términos generales lo que al niño le sucede. Ya hemos dicho que los niños que son
diagnosticados con TDA/H no padecen bajo ninguna circunstancia una “enfermedad” en
el sentido biológico, por lo que debemos evitar ver el asunto como una cuestión médica, y
verlo más como algo que está a nuestro alcance como padres, madres y/o profesores de
estos niños. Son precisamente los padres y madres los que más conocen a su hijo y por lo
tanto sus explicaciones, opiniones y juicios sobre la situación deberían ser validados y
respetados por cualquier profesional e institución.
Dicho esto debemos recordar que la mayoría de las dificultades de los niños
diagnosticados con TDA/H deben ser entendidas como una relación entre las
capacidades del niño y las exigencias de su entorno, por lo que debemos tener
conocimiento de cuál es la dificultad específica que nuestro hijo tiene en un contexto
específico. Para orientarnos un poco en cómo poder evaluar la situación por nosotros
mismos debemos tener siempre en cuenta las siguientes preguntas:
a) ¿En qué consiste concretamente el “problema”?
b) ¿Para quién es el problema?:
c) ¿Qué desea cambiar o mejorar específicamente junto a su hijo?
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Para explicar de qué manera se puede responder cada pregunta puede guiarse por la siguiente
información:
a) ¿En qué consiste concretamente el “problema”?: Puede haber cosas muy puntuales y simples
como perder útiles, pararse en clases, hablar en exceso, no terminar las tareas, que son
comportamientos normales en muchos niños y niñas pero que si son sobredimensionados pueden ser
etiquetados como “comportamientos problemáticos”. También puede haber problemas dignos de una
mayor preocupación y atención, como que el niño se comporte de manera demasiado agresiva con
compañeros o con los padres o que tenga problemas importantes de aprendizaje (¿en qué asignatura o
área específica?), si se ha vuelto demasiado retraído o si ha tenido cambios muy bruscos en su
comportamiento. Recuerde que “Déficit atencional e hiperactividad” no significa mucho en concreto,
pero la presencia de estos aspectos pueden indicar otras complicaciones que ocurren en el mundo
interno del niño, en las cosas que él vive, percibe y siente de su entorno, todo esto es necesario
descubrirlo. Recuerde, de lo más simple y cercano a lo más complejo y alejado.
b) ¿Para quién es el problema?: La mayoría de las veces la recomendación de consultar un
psiquiatra e incluso de medicar al niño es promovida inicialmente por un profesor. Suele suceder que
este docente se “queja” del comportamiento del niño, diciendo que es hiperkinético, que interrumpe la
clase y el aprendizaje de los demás niños. Si ese es el caso usted tiene que tener en cuenta de que el
problema es para el profesor, no para el niño. Es el educador quien debe hacerse responsable de lo que
ocurre en la sala y del adecuado desarrollo de la clase, no usted. Los padres deben solamente asumir la
responsabilidad que les compete en los aspectos que implican una dificultad para el bienestar del niño
(puede ser en relación al rendimiento escolar o a los sentimientos del estudiante como autoestima o
sensación de frustración) o para el bienestar familiar (por ejemplo, dificultad para controlar al niño en
la casa y ejercer la autoridad suficiente sobre él). Por lo tanto, para responder esta pregunta también es
importante considerar en qué contexto se da. Recordemos que para diagnosticar TDA/H las dificultades
de atención o comportamiento deben darse tanto en el colegio como en la casa, pero en la práctica suele
considerarse sólo los problemas en el establecimiento educativo como justificación para realizar el
diagnóstico.
c) ¿Qué desea cambiar o mejorar específicamente junto a su hijo?: Para responder a esta
pregunta se deben considerar las dos respuestas anteriores, es decir, las dificultades concretas del
entorno para adaptarse a las necesidades del niño y para quién es el problema. Por ejemplo, si su deseo
es que el niño mejore su conducta en el colegio o se mantenga sentado en una silla tal vez el uso de
medicamentos le pueden servir, pero en este caso le estaría solucionando el problema al profesor/a o
solo a usted mismo, sin que se hayan solucionado los problemas de su hijo en cuanto a lo que siente o a
lo que está aprendiendo realmente. Debe proponerse una meta clara, concreta y realista y contemplar
un tiempo considerable para que esta meta se puede alcanzar. Si es necesario debe colocarse metas más
pequeñas previas al logro de una mayor, como por ejemplo, mejorar su comunicación con el niño puede
ser una meta previa a la de lograr que haga las tareas.
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Este nivel es muy importante, se recomienda reforzar las ideas anteriores a través de la siguiente
descripción:
Respondiendo a estas preguntas usted podrá tener una evaluación propia de la
problemática, más concreta y práctica que lo que puede aportar un diagnóstico clínico o
médico, un rótulo abstracto entregado por un especialista. De esta forma usted ya no
dirá “mi hijo es hiperactivo o mi hijo tiene déficit atencional”, sino “mi hijo está
teniendo tales dificultades en tal contexto pero estoy seguro que podré lograr tal
objetivo si empiezo por mejorar tal aspecto”.
Nivel 2. Actitud de los padres frente al problema
Este nivel se refiere a los aspectos que pueden contribuir a fortalecer el sentido de
seguridad en los padres, necesarios para reducir la angustia y mantener un control sobre
la situación. Como vimos en el nivel anterior, el tener una visión clara del problema, el
poder definirlo de manera práctica y el establecer metas realistas y concretas le otorga
autonomía a los padres para poder ejercer la autoridad suficiente sobre el niño y
relacionarse de forma activa con profesores, profesionales de salud y otros padres, sin
que se invaliden las apreciaciones que ustedes como padres tienen sobre la situación. A
esta actitud la llamaremos “determinación”.
De acuerdo a la información anterior explique la idea de “determinación” y agregue la siguiente
descripción:
Los padres con determinación buscan ayuda en función de sus necesidades,
reconocen los recursos que ellos mismos poseen para solucionar el problema, negocian
los tratamientos o las estrategias de afrontamiento con los profesionales o profesores,
están abiertos a escuchar consejos pero no aceptan de manera pasiva lo que los
“expertos” dicen, fijan los límites de los riesgos que están dispuestos a asumir
rechazando la medicación, exigen que se les explique los objetivos de las intervenciones
psicológicas en un lenguaje comprensible para ellos, reclaman sus derechos frente a las
irregularidades que se cometen tanto en consultorios como en colegios, se organizan con
otros padres y transmiten una sensación de seguridad y control a sus hijos, que puede
ayudar a reducir las tensiones que pesan sobre ellos.
Para hacerse una idea más concreta de lo que significa asumir una actitud de determinación puede
ejemplificar mencionando lo siguiente:
- Para lograr tener determinación es importante evaluar por sí mismo la situación,
como se dijo en el nivel 1, y también resolver aspectos de autoestima, reducir los
sentimientos de culpabilidad (no de responsabilidad) frente a la situación y reducir otras
tensiones que pueden estar afectando. Suele suceder que las mamás asumen la totalidad
de las responsabilidades domésticas, sometiéndose a una alta tensión y falta de tiempo
por tener que estar solucionando muchos problemas a la vez. Así, puede que distribuir
de mejor manera los roles en el hogar pueda contribuir a que la madre del niño se relaje
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y pueda afrontar el problema de manera más segura, sin presiones ni inseguridades que
la hagan caer en la desesperación.
Recomendación útil:
- Para los padres de sectores populares que no pudieron terminar su enseñanza media, es
importante que puedan retomar sus estudios, principalmente para solucionar problemas de autoestima
y para sentirse más seguros en participar en el proceso educativo de sus hijos. Existen evidencias
considerables que muestran que los hijos de los padres, que ingresan a nivelar sus estudios o a
capacitarse, aumentan su rendimiento escolar, porque la figura de cuidado representa para el niño un
modelo a seguir y/o porque se generan instancias de estudio compartido que refuerzan los lazos de
cariño y autoestima que benefician al niño en el aumento de su capacidad y rendimiento escolar.
Consejo general:
- En relación a tu hijo o hija tú eres el verdadero experto. Nadie lo conoce mejor que
tú. Nadie ha invertido más tiempo, esfuerzo y amor en él que tú. Siéntase segura en su rol
como madre y padre. Las dificultades de su hijo no son necesariamente su culpa, no significa que haya
fallado en algo, ni es probable que existan problemas graves que estén fuera de su control y necesite
ayuda urgente de algún especialista. Piense que cada dificultad que aparece es una oportunidad de
compartir con las demás personas su preocupación y aprender de su hijo y mejorar su relación con él.
Intente no mostrarse insegura ni descontrolada con la situación. Es necesario poner atajo a la sensación
de descontrol y la manipulación mutua con su hijo/a antes que aparezcan las intenciones de agresión
verbal o física bajo la sensación de impotencia, para ello es importante que busque alternativas entre
sus personas cercanas, converse sus preocupaciones y vaya poniendo en práctica los consejos que vaya
obteniendo, hasta alcanzar una solución que le permita recuperar el control de la situación y sentirse un
poco más tranquila.
Nivel 3: Recursos presentes en el contexto escolar
Este nivel hace referencia a las condiciones en la institución educativa y la comunidad escolar, que
pueden ser útiles para promover alternativas a la medicación psiquiátrica:
Evalúe los recursos con los que cuenta dentro del colegio de su hijo. Por ejemplo,
disposición del profesor para adaptar la metodología de clases a las necesidades de los
niños/as, nivel de organización de apoderados del colegio donde estudia su hijo/a; si el
proyecto educativo del colegio cuenta con actividades extra-programáticas que potencien
ciertas habilidades de su hijo/a (talleres de autoestima o de algún deporte); clases de
reforzamiento y apoyo psicopedagógico en la institución educativa; compromiso y apoyo
de psicólogos y psicopedagogos para buscar soluciones alternativas a la pastilla, etc.
Lea complementariamente los siguientes consejos, que refuerzan algunos de los contenidos
vistos en la sesión 2:
- Algo muy efectivo es que usted se organice con otros apoderados, para que los
docentes y las autoridades del colegio se den cuenta de que los padres están implicados
en la enseñanza de sus hijos.
- Pueden formar mesas de trabajo junto a profesores y directivos para enfrentar
problemas concretos del colegio que afectan a los niños/as. Por supuesto que esto
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depende de muchos factores como las posibilidades económicas del establecimiento, la
disposición de los directivos o profesores, el grado de conciencia y compromiso de los
demás padres y el tiempo con el que cuentan los apoderados, sin embargo es una medida
muy importante que debe considerar para hacer respetar el derecho a la educación que
en muchos lugares hoy en día está siendo pasados a llevar.
Recuerde que la Ley General de Educación en su artículo 10 establece que:
"Los padres, madres y apoderados tienen derecho a ser informados por los directivos y docentes a
cargo de la educación de sus hijos respecto de los rendimientos académicos y del proceso educativo de
éstos, así como del funcionamiento del establecimiento, y a ser escuchados y a participar del proceso
educativo en los ámbitos que les corresponda, aportando al desarrollo del proyecto educativo en
conformidad a la normativa interna del establecimiento"
- Por eso es importante, conocer y compartir con las demás personas cuáles son
sus derechos en cuanto al tema del Déficit Atencional. Saber por ejemplo, que el
Ministerio de Educación establece que no se puede condicionar la matrícula a su hijo/a
para obligarlo a tomar medicamentos, ni exigir exámenes neurológicos, psicológicos o
psiquiátricos para condicionar su permanencia en el establecimiento, porque no es legal
ni ético obligar a los niños/as a someterse a formas de diagnóstico o tipos de tratamiento
considerados riesgosos e innecesarios.
Recuerde que la medicación con metilfenidato es un caso más de vulneración de
los derechos de los niños/as y de sus padres. En muchos casos:
1. A los niños se les discrimina por no ajustarse a la rutina escolar claramente en
crisis de pertinencia (sin sentido y aburrida para los niños/as). Etiquetándolos con una supuesta
enfermedad que no esta probada su existencia biológica.
2. Se vulnera el derecho de los padres a elegir la educación de sus hijos al
presionarlos a sacarlos de la escuela si ellos no acceden a someter al niño al tratamiento con el
medicamento.
3. Se vulnera la integridad física y psicológica del niño al someterlo a una medicación
cuestionada por existir estudios concluyentes acerca de sus posibles daños colaterales.
4. Se vulnera la libertad de conciencia, las convicciones ideológicas y culturales,
de las familias que no quieran medicar a sus hijos ni alterar su esencia, espíritu o libre desarrollo con
psicofármacos que indudablemente modificarán psicológicamente a los niños/as por la necesidad de
ajustarlos a un determinado patrón de relaciones sociales.
5. Se vulnera el derecho de los niños a estudiar en un ambiente tolerante y de
respeto mutuo, al mantener sistemas educativos con más de 30 niños/as por sala y profesores con
malas condiciones para realizar su trabajo.
- El niño tiene derecho a educarse y los establecimientos educacionales no pueden
negarle este derecho, ni condicionarlo a cualquier tipo de medida arbitraria. La
educación es un derecho que está garantizado por la Constitución de la República, usted
debe defenderlo, tomar una posición activa y acudir a todas las instancias posibles en
caso de que este derecho sea vulnerado (cartas al Ministerio de Educación, incluso hay
padres que mandan cartas a periódicos e intentan asociarse con otros padres que están
atravesando por lo mismo para llamar la atención de los medios de comunicación, etc.).
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En este sentido, es de crucial importancia:
- Informarnos para así tener las herramientas para defender los derechos de los niños y
el derecho que tienen a educarse.
- Si la institución educativa cuenta con programa de Integración Escolar, fiscalizar
activamente el destino de los fondos de subvenciones. Exigir la presencia de psicólogos y
psicopedagogos en los colegios para realizar un trabajo en conjunto con el niño y la
familia para buscar soluciones alternativas al fármaco y que no se derive al niño a otros
especialistas.
- Enfrentar la problemática de manera organizada y con unidad. Por ejemplo, tratar el
tema en reunión de apoderados, colectivizar la información y que todos los padres
manifiesten al colegio que no están de acuerdo con el tratamiento farmacológico. La
acción individual, en muchos casos, no sirve.
- Buscar estrategias para contar con el compromiso y apoyo de los profesores y toda la
comunidad escolar para transformar las prácticas educativas bajo una perspectiva más
inclusiva y humanista, reconocedora de las diferencias de aptitudes, habilidades e
intereses de cada niño y niña (estas medidas están siendo implementadas en muchos
países bajo la recomendación de los estudios de la UNESCO y la UNICEF como los nuevos
desafíos de la política educacional a nivel mundial).
Nivel 4: Recursos presentes en el contexto familiar
Es necesario introducir el tema de los recursos del ambiente familiar con el siguiente párrafo:
Es importante modificar los elementos que puedan actuar como estresantes del
niño dentro del ambiente familiar. Si existen muchas tensiones es muy probable que los
hijos no puedan concentrarse muy bien en lo que ocurre en el colegio, por ello debemos
despejar que no existan aspectos emocionales que estén influenciando su
comportamiento o aprendizaje. Muchas veces son los/as hijos/as los/as que manifiestan
problemas en su comportamiento para llamar la atención sobre dificultades que existen
en el funcionamiento familiar. Por esta razón los niños/as pueden ser injustamente
diagnosticados y medicados, si es que no se toman en cuenta los elementos de su entorno
que lo hacen actuar, sentir y pensar como la hace.
Puede dar ejemplos de cómo puede influir la dinámica familiar en el comportamiento del niño.
Ejemplo:
- Se hace evidente en el caso de una separación reciente de los padres. También en el caso de
ciertas dinámicas familiares donde existe una sobre-implicación de los abuelos u otras personas del
entorno familiar por sobre la autoridad de los padres, dificultando el establecimiento de reglas y límites
claros; también la ocurrencia de discusiones y peleas constantes entre los padres que pueden promover
situaciones de estrés, complicidad, culpas o resentimientos en miembros de la familia; diferencias
marcadas en roles de género, como puede ser un padre poco implicado en la educación de sus hijos o
una madre muy sobre-protectora y controladora que no permite desarrollar autonomía en el niño.
Algunas de estas dinámicas son muy comunes en nuestra sociedad, que contribuyen a promover un
ambiente familiar inestable y cuya tensión de expresa finalmente a través del comportamiento del niño.
En oposición a ello y tomando algunas simples medidas, es necesario promover un ambiente familiar
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flexible pero que permita cierta seguridad y confianza para el niño: por ejemplo, estableciendo normas y
límites claros y diferenciados, incluyendo al niño en la planificación de las actividades del fin de semana
o de horas libres y en las cuales él puede tener un margen de decisión, preguntando su opinión e
invitándolo a motivarse con ello; promoviendo la participación equitativa de los roles de género en el
hogar, invitando por ejemplo al padre a que ayude a sus hijos/as en las tareas escolares, para que lo
sientan como una figura cercana y de confianza, etc.
Nivel 5: Comunicación con el niño
Introduzca el tema de la relación con el niño a través del siguiente párrafo:
Este nivel es muy importante, ya que lo que suele ocurrir es que se realizan
diagnósticos, se recetan medicamentos, se manda al niño al psiquiatra o al psicólogo y se
toman una serie de medidas muchas veces sin tener un acercamiento genuino al mundo
interno del niño. En el caso que existan dificultades para nuestro hijo, debemos intentar
comunicarnos con él, saber sus intereses, sus deseos y motivaciones, también debemos
conocer sus preocupaciones e inquietudes, en definitiva, saber que piensan, ya que por
ejemplo éste puede interpretar la derivación a un especialista externo a la institución
educativa no como un apoyo a la problemática que presenta sino que más bien como un
castigo, etc.
Explique algunos de los siguientes consejos, intentando recoger también la experiencia de los
propios participantes:
- Si vemos a nuestro hijo como un niño anormal o como un niño con una alteración
cerebral, le estaremos transmitiendo sin querer un sentido de inferioridad, ya que el
TDA/H representa una etiqueta que puede funcionar como un estigma. Por ello, debemos
hacer mención a su carácter único, a las potencialidades que posee y que puede
desarrollar y al hecho de que muchas de las dificultades que pueda tener en el colegio se
pueden superar.
- Tenemos que ver esta situación como una oportunidad para mejorar la relación
que tenemos con nuestros hijos, ya que muchas veces sólo demandan mayor atención.
Por ello es muy importante la organización familiar. Lo padres deben planificar sus
actividades para así poder dedicarle una parte de su tiempo exclusivamente al niño. Aquí
el tiempo no se mide en cantidad, sino en calidad, es decir, un tiempo donde los padres
se dedican exclusivamente al niño y dejan afuera preocupaciones o aspectos de otro tipo.
- Luego es importante definir horarios, una rutina que le de estabilidad al niño y
que contemple horarios para comer, para jugar, para hacer las tareas y estudiar, para
compartir en familia, etc. Los horarios y las actividades a desarrollar en familia pueden
ser negociados con el niño, esto le dará la sensación de que es incluido y aprenderá a
cumplir en decisiones en la que él mismo participó.
- Es importante comenzar de lo más simple a lo más complejo. Si su hijo no le gusta
hacer las tareas, quizás lo primero que tenga que hacer sea motivarlo. Esta motivación
debe ser “activa”. Motivación activa significa que la madre o el padre se sienta en la mesa
junto al niño, se proponen un horario o una meta clara y realista, los padres apoyan al
niño y de a poco le van dando independencia en la realización de estas metas.
40
- Si al principio la meta que se propuso no se cumple, quizás deba primero lograr
que el niño se acostumbre al “tiempo y espacio”, es decir, que se adapte a dedicar
diariamente una cantidad de tiempo fijo en un lugar fijo, para realizar actividades que
aporten a su aprendizaje. Al principio ese “tiempo y espacio” puede ser llenado con
actividades lúdicas, con juegos de mesa, lo importante es poder ir construyendo una
relación afectiva necesaria para que el niño progresivamente pueda ir asumiendo la
responsabilidad de cumplir con las obligaciones del colegio, pero para eso debe haber
una relación afectiva, el niño debe ver a su madre o padre como un apoyo, como una
fuente de conocimientos, como un profesor pero con más paciencia y más dedicado
exclusivamente e él. Por eso es que contar con tiempo es sumamente importante.
- Estimule a su hijo a expresar sus intereses, que le cuente las cosas que ha
aprendido, cómo pueden aplicarse esos conocimientos a cosas concretas en la vida
cotidiana (las matemáticas para contar cosas, el lenguaje para expresar como me siento,
la compresión del medio natural para cuidar a una mascota y regar una planta, etc.).
Ayude a su hijo a planificar proyectos que él pueda realizar como construir juguetes con
materiales reciclables, por ejemplo.
- Usted debe ser un referente de sabiduría para su hijo, enséñele lo que usted
“sabe del mundo”, sus creencias y valores de manera clara y sencilla, de forma que no
vea sus decisiones hacia él como algo impuesto sino como un proyecto de vida familiar
que es compartido y debe ser respetado por las razones señaladas.
- También es importante reforzar los aspectos positivos y los logros obtenidos por
su hijo/a, por muy pequeños que sean, felicitarlo es más efectivo que el castigo. Póngale
metas acotadas y realistas de manera que el pueda cumplirlas y no se frustre en exceso,
acompáñelo en ese proceso. Evitar amenazas catastrofistas: “no vas a ser nadie en la
vida”, “nadie te va a querer si sigues así”. Estos procesos de estigmatización muchas
veces comienzan en la Escuela, es importante reconocerlos y tomar medidas al respecto
porque pueden estar dañando la autoestima del niño.
- Evite premiarlo con cosas materiales, prefiera siempre refuerzos afectivos y
reconocimiento genuino como mayor tiempo juntos o que pueda ayudar en alguna
actividad que le guste realizar, piense que la relación que construye con sus hijos y su
familia es de largo plazo, no hay recetas mágicas ni soluciones infalibles. Puede que
tenga que enfrentar otros problemas: económicos, personales, de pareja, familiares, etc.
y sólo así se dará cuenta que puede actuar de manera más segura con sus hijos, se sentirá
menos presionada/o y dejará de desplazar toda esta carga hacia los niños.
- Un buen dato es promover el ejercicio y la actividad física en base a algún deporte
al aire libre: salir con nuestros hijos a lugares de esparcimiento, jugar con él en contacto
con la naturaleza puede ser una increíble y fácil solución. También desarrollar un hobby:
Es aconsejable apoyarlo en que realice una actividad que le guste, en que se sienta que lo
hace bien. Puede ser un deporte como hemos dicho, una actividad artística u otras.
- Según los recursos con los que disponga como padre o madre y en base a lo que
usted sabe de su hijo, podrá determinar cuáles son las alternativas de solución más
viables para el bienestar del niño sin mediar por ningún tipo de orientación profesional
que en muchos casos son muy costosas (flores de Bach, psicoterapia) y en otros casos
muy peligrosas (medicación psiquiátrica).
41
Nivel 6: Técnicas específicas
En este nivel es en donde aplicamos ejercicios o tareas específicas para obtener un resultado
muy particular. Por ejemplo, si determinamos que a nuestro hijo le cuesta leer como los otros niños
porque presenta dificultades para retener las sílabas en su mente, tenemos que reforzar su memoria a
través de algún elemento que nos pueda ayudar para eso, por ejemplo, un “memorice”. En todos los
casos es importante tener un ambiente relajado, incluso se pueden utilizar técnicas de relajación.
Aquí es importante explicar que las herramientas específicas que ocupemos dependen de cada
niño/a, además se debe promover que los participantes del taller puedan aportar con métodos que les
han sido útiles y le puedan servir a otros padres.
Es importante resaltar la importancia del “juego”. El juego es muy importante para el desarrollo
emocional e intelectual de los niños. En el juego están involucradas muchas habilidades, como respetar
turno, liberar la imaginación y también focalizar la atención y dirigir los esfuerzos hacia una meta. El
juego es muy útil para ordenar el mundo del niño siempre y cuando tenga un sentido, un principio, un
final y una meta. En cualquier actividad que se implemente estimule la conducta dirigida a metas.
Recuerde que la finalidad de esta sesión es mostrar alternativas a la medicación y herramientas
prácticas generales que pueden a contribuir a tomar un mayor control sobre la situación. Para finalizar,
comente la importancia de evaluar los problemas y sus soluciones desde los aspectos más sencillos y
cercanos; dejando en último lugar las alternativas más complejas y alejadas, el siguiente párrafo habla
sobre esto bajo el concepto de “principio de parsimonia”:
Es importante mencionar que para evaluar cualquier situación que aparezca como
problemática, debemos saber guiarnos por el “principio de parsimonia”. Esta es una
palabra muy bonita, que todos deberíamos aprender y que significa básicamente partir
desde lo más simple y cercano, y solo si esto no va dando resultado avanzar hacia lo más
complejo, alejado y desconocido para nuestra realidad. En otras palabras, debemos
siempre primero utilizar las explicaciones y soluciones más sencillas, las que están más a
nuestro alcance y que forman parte de nuestro mundo cotidiano. En el caso del TDA/H
esto significa probar con métodos simples, que no impliquen mayores riesgos y que sean
parte de nuestro saber popular, el saber de nuestras madres o abuelas en muchos casos
puede resultar más útil, en comparación con métodos como la medicación, que nadie
sabe cómo funcionan pero que se conocen muy bien los riesgos y daños que implica. Para finalizar el taller invite a las personas a comentar al grupo sus impresiones acerca de esta
experiencia psicoeducativa y rescate algunas ideas fuerza con el siguiente párrafo:
“Sea cual sea el problema psicológico o alteración de comportamiento de que se
trate, siempre es preferible intentar todas las formas y procedimientos útiles, prácticos y
cotidianos que podemos encontrar en la sabiduría de la cultura popular, antes de llegar a
consultar a cualquier especialista. La gran mayoría de los problemas psicológicos e
interpersonales que requieren apoyo emocional se pueden resolver entre amigos,
vecinos y familiares con un mínimo de sabiduría popular, en la vida cotidiana, antes de
que la intervención del Psicólogo, Psiquiatra o cualquier otro especialista sea necesaria.
El integrarse a grupos de pares, o de intereses comunes, suele tener muy buenos efectos
terapéuticos en la Salud Mental de las personas. Compartir las problemáticas, poder
hablar de ellas, tomar decisiones colectivas para mejorar la situación, sentirse capaz de
manejar soluciones desde nuestras propias capacidades de acción es el objetivo, por
ejemplo, de este taller grupal y creemos que se ha conseguido con la ayuda de todos los
que participamos en su construcción colectiva sesión a sesión”
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ANEXO 1
Taller grupal La Atención que no se presta:
Mitos y Realidades en torno al Déficit Atencional/Hiperactividad
Presentación
Como padres tenemos muchas responsabilidades: trabajo, estudios, tareas del hogar y además
hacernos cargo de la crianza y educación de nuestros hijos. Queremos que éstos crezcan sanos y fuertes, que aprendan valores y que les vaya bien en el colegio, para que así tengan un mejor futuro. Pero, ¿Qué hacer cuando el colegio nos dice que hay problemas con nuestro hijo o hija?, ¿Cómo reaccionamos?, ¿Qué podemos hacer? A menudo nos preocupamos, nos sentimos culpables, intentamos buscar ayuda profesional, sentimos una especial preocupación por saber cómo ayudar a nuestros hijos e hijas ¿Cómo enfrentar esta situación?
El Taller Grupal “La Atención que no se presta: Mitos y Realidades en torno al Déficit Atencional” constituye un espacio de conversación y apoyo, para acoger preguntas e inquietudes en torno estas temáticas y recibir la mejor orientación acerca de cómo podemos a ayudar a nuestros hijos.
Objetivos
Acoger inquietudes, preguntas, reflexiones y experiencias en relación a la temática del Déficit Atencional/Hiperactividad.
Generar un espacio de conversación y apoyo en relación a las preocupaciones asociadas al Déficit Atencional/ Hiperactividad.
Dar orientación, entregar herramientas y desarrollar soluciones prácticas en torno al tema del Déficit Atencional/Hiperactividad.
Cronograma
1° sesión. “Introducción al Déficit Atencional/Hiperactividad (TDA/H) como problemática”
1. Presentación general del Taller grupal. 2. Actividad grupal "¿Qué entendemos por Déficit Atencional?" 3. Presentación de material informativo/audiovisual. 2° Sesión. "Realidad actual del Déficit Atencional/Hiperactividad en Chile"
1. Introducción. 2. Circuito de detección, diagnóstico y forma común tratamiento de TDA/H en Chile. 3. Aspectos Legales, Normativas y Derechos del Ministerio de Educación en torno al diagnóstico de Déficit Atencional/Hiperactividad. 4. Políticas Públicas en Salud Mental en el tratamiento del TDA/H. 3° Sesión. "Mitos y realidades en torno al Déficit Atencional/Hiperactividad"
1. Introducción. 2. El mito del TDA/H como enfermedad mental. 3. El problema del TDA/H y el comportamiento "normal" en la infancia. 4° Sesión. "¿Qué hacer? Recomendaciones y consejos prácticos en torno al TDA/H"
1. Introducción. 2. Niveles de acción para abordar la temática del TDA/H. 3. Cierre del Taller Grupal.
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Comentarios: _________________________________________________________________
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