ALCANZA NUESTRO MUNDO 

Guía devocional de 28 días

TABLA DE CONTENIDO SEMANA 1: Volver a entregar Todo a Dios • Una vida revolucionaria • Volver a entregar mi Yo • Volver a entregar mi familia • Volver a entregar mis Relaciones • Intimidad con Dios • Victoria a través de la rendición • Una vida de victoria SEMANA 2: Escuchando la Voz de Dios • Escuchar la voz de Dios • El camino a la sabiduría • Entrando en la presencia de Dios • Escuchando a través de la palabra de Dios • Escuchando a través de la oración • Escuchando el Espíritu de Dios • Escuchando a Dios a través de las circunstancias SEMANA 3: Obediencia a Dios • Entendiendo el Plan de Dios • Participando en el Plan de Dios • Parado sobre la Roca (Fe Inquebrantable) • Lecciones de Paciencia y Perseverancia que no tienen precio • Obediencia a la Palabra de Dios • El Poder del Acuerdo • Obediencia a pesar de las consecuencias SEMANA 4: La Intervención de Dios • El Dios de Milagros • La prueba de Elías • La doble porción de unción de Elías • Cinco panes y dos peces • Sobre el camino a Damasco • La intervención de Dios en la familia

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• Nuestro reto SEMANA 1: VOLVER A ENTREGAR TODO A DIOS El mundo aún tiene que ver lo que Dios hará con, a través de, en y por el hombre que está totalmente consagrado a Él. -Dwight L. Moody

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DÍA UNO UNA VIDA REVOLUCIONARIA Por lo tanto, amados hermanos, les ruego que entreguen su cuerpo a Dios por todo lo que él ha hecho a favor de ustedes. Que sea un sacrificio vivo y santo, la clase de sacrificio que a él le agrada. Esa es la verdadera forma de adorarlo. No imiten las conductas ni las costumbres de este mundo, más bien dejen que Dios los transforme en personas nuevas al cambiarles la manera de pensar. Entonces aprenderán a conocer la voluntad de Dios para ustedes, la cual es buena, agradable y perfecta. Romanos 12:1-2 ¡Qué diferencia haría si entendiéramos la vida abundante que Dios desea que experimentemos! Fuimos creados a imagen de Dios. Como Hijos del Creador, somos herederos de todo lo que posee: La tierra es del Señor y todo lo que hay en ella; el mundo y todos sus habitantes le pertenecen. (Salmos 24:1) Dios desea lo mejor para sus hijos. Todo lo que Él requiere para una vida más grande y maravillosa es rendirse a Él. Él exige obediencia. Él quiere que nos presentemos como sacrificios vivos. Él quiere que evitemos la influencia del mundo. Él quiere que seamos renovados constantemente, que nos rindamos diariamente. Entonces podremos conocer la "buena, agradable y perfecta voluntad" de Dios. Lo mejor de todo es que Él ya ha provisto todo lo que necesitamos para una vida revolucionaria. Si ustedes permanecen en mí y mis palabras permanecen en ustedes, pueden pedir lo que quieran, ¡y les será concedido! Cuando producen mucho fruto, demuestran que son mis verdaderos discípulos. Eso le da mucha gloria a mi Padre. (Juan 15:7-8). Él quiere tener comunión íntima con nosotros. Él quiere que participemos en su naturaleza divina y disfrutemos de toda su creación: “mi propósito es darles una vida plena y abundante” (Juan 10:10). ¡Puedes tener una vida plena, abundante y revolucionaria! Durante este mes, prepárate para una nueva vida. Vuelve a entregarte a Él. Pon a prueba a Dios y observa cómo cumplirá Su Palabra en tu vida, cómo convertirá tus sueños en realidad. Dwight L. Moody, uno de los pastores y maestros de Biblia más importantes de la historia, solía decir: "El mundo aún no ha visto lo que Dios hará con, a través de, en y por el hombre que está totalmente consagrado a Él". Que podamos unirnos a aquellos que buscan estar tan comprometidos con el Señor Jesús. Hoy siento que Dios me está diciendo…

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Entonces el Señor Dios llamó al hombre: — ¿Dónde estás? (Génesis 3:9) “¿Dónde estás?” Esa no es la pregunta que queremos escuchar, sin importar dónde nos encontremos en la vida, ya que requiere que hagamos un balance de nosotros mismos y que seamos honestos sobre la situación en la que nos encontramos. No queremos lidiar con la situación en la que estamos. Queremos encontrar, sobre todo, un escape rápido y sin dolor de los desafíos que enfrentamos. Cuando Adán y Eva desobedecieron a Dios, se escondieron de Él. El Señor quería darles lo mejor de sí, pero lo rechazaron. Sin embargo, incluso en medio de su confusión, desobediencia y culpa, quería mostrarles el camino de regreso a la comunión con Él. Hoy es lo mismo. Cristo vino por esta razón: “Dios no envió a su Hijo al mundo para condenar al mundo, sino para salvarlo por medio de él.” (Juan 3:17) "Adán, ¿dónde estás?" Dios hizo esa pregunta para que Adán fuera honesto acerca de su grave situación. Cada uno de nosotros debe responder esta misma pregunta, evaluando dónde estás. Este es un prerrequisito para superar sus desafíos y pasar a un nuevo nivel. No puedes experimentar una revolución en tu caminar con Dios hasta que respondas la pregunta sobre dónde estás ahora. El hijo pródigo, según Lucas 15:17, "volvió en sí" antes de que pudiera comenzar el viaje de regreso a casa. Ese es el primer paso hacia cualquier solución verdadera. Del mismo modo, Jesús hizo esta verdad muy clara cuando dijo: Jesús les contestó: “La gente sana no necesita médico, los enfermos sí. (Lucas 5:31) “¿Dónde estás?” Nunca avanzarás en una caminata más emocionante con Dios hasta que mires a Dios, reconociendo tu necesidad permanente de Su ayuda y diciendo: "Estoy aquí, Señor. Ten piedad de mí, un pecador". Hoy siento que Dios me está diciendo… ________________________________________________ ________________________________________________ ________________________________________________ ________________________________________________ ________________________________________________ ________________________________________________

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Mi respuesta es… ________________________________________________ ________________________________________________ ________________________________________________ ________________________________________________ ________________________________________________ ________________________________________________ Mi oración para hoy es… ________________________________________________ ________________________________________________ ________________________________________________ ________________________________________________ ________________________________________________ ________________________________________________ DÍA TRES VOLVER A ENTREGAR A MI FAMILIA Yo lo escogí a fin de que él ordene a sus hijos y a sus familias que se mantengan en el camino del Señor haciendo lo que es correcto y justo. Entonces yo haré por Abraham todo lo que he prometido”. Génesis 18:19 ¿Sabías que la palabra hebrea para "padre" también significa "maestro"? Abraham fue elegido por Dios para establecer Su pacto con la humanidad. También fue elegido para ser un ejemplo de cómo Dios quiere enseñar y ayudar a sus hijos. El patrón se estableció desde el principio de la relación de Dios con Su creación. A lo largo de la Biblia, la importancia de la familia y la crianza de los hijos es absolutamente vital, y a medida que avanzas a un nuevo nivel de vida revolucionaria, es fundamental que le entreguemos de nuevo nuestra familia.

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Moisés entendió esto, porque amonestó a los padres de Israel de esta manera: “Debes comprometerte con todo tu ser a cumplir cada uno de estos mandatos que hoy te entrego. Repíteselos a tus hijos una y otra vez. Habla de ellos en tus conversaciones cuando estés en tu casa y cuando vayas por el camino, cuando te acuestes y cuando te levantes.” (Deuteronomio 6:6-7) Que vuelvas a entregar a tu familia diariamente no se puede enfatizar lo suficiente. Mientras las familias de Israel obedecieran este mandato, prosperarían. La estricta adhesión de muchos judíos a este principio a través de los siglos ha preservado su raza mucho después de que muchas otras han desaparecido. Por el contrario, la desobediencia a este comando siempre ha causado caos y destrucción. Isaías 39:4 registra una pregunta hecha a Ezequías: “¿Qué vieron en tu palacio (o casa)?” —preguntó Isaías. —Lo vieron todo —contestó Ezequías—. Les mostré todo lo que poseo, todos mis tesoros reales. ¿Qué ve tu familia en tu casa? ¿Los tesoros de Dios o algo más? Las vidas que resultan más afectadas son las de quienes viven contigo. Si vives una vida como la de Cristo, ellos lo verán y la recibirán. Al igual que con el carcelero de Filipo en Hechos 16, la salvación puede llegar a todos los que moran allí. Comienza una nueva herencia revolucionaria en tu familia. Oren juntos, lean la Palabra de Dios juntos. Vuelve a entregar a tu familia a Dios. Hoy siento que Dios me está diciendo… ________________________________________________ ________________________________________________ ________________________________________________ ________________________________________________ ________________________________________________ ________________________________________________ Mi respuesta es… ________________________________________________ ________________________________________________ ________________________________________________

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________________________________________________ ________________________________________________ ________________________________________________ Mi oración para hoy es… ________________________________________________ ________________________________________________ ________________________________________________ ________________________________________________ ________________________________________________ ________________________________________________ DÍA CUATRO VOLVER A ENTREGAR MIS RELACIONES En esta nueva naturaleza no hay griego ni judío, circunciso ni incircunciso, culto ni inculto, esclavo ni libre, sino que Cristo es todo y está en todos. Colosenses 3:11 La Palabra de Dios es un libro de estudio sobre relaciones. En el centro de cada página está el mensaje de la reconciliación. La vida de Jesús dio ejemplo de ello, y nosotros, como creyentes, debemos participar en el ministerio de construir relaciones fuertes y positivas. El apóstol Pablo entendió esto. Escribiendo bajo la inspiración del Espíritu Santo, tocó cuatro áreas principales que tradicionalmente han separado a las personas: raza (griego o judío), religión (circuncidado o incircunciso), cultura (bárbaro o escita) y economía (esclavo o libre). La respuesta a cada desafío en la sociedad es Jesucristo viviendo a través de nosotros. Una vida de reconciliación comienza en el corazón. El problema principal no es la raza, la religión, la cultura o la posición económica. En la cruz de Jesucristo, todos somos culpables. Es por eso que el Calvario constituye una representación para cada persona de el medio de reconciliación con Dios, y del uno con el otro.

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Esto ciertamente debe aplicarse a todo lo que hacemos como miembros de la misma familia: “Por lo tanto, siempre que tengamos la oportunidad, hagamos bien a todos, y en especial a los de la familia de la fe.” (Gálatas 6:10). Asimismo, el ministerio de reconciliación debe extenderse a los que están fuera de la familia. La cruz de Jesucristo no pertenece sólo a los creyentes. Estamos llamados a compartir el Evangelio con quienes nos rodean a través de todo lo que hacemos. Vuelve a entregar tus relaciones hoy. Construye puentes. Vive tu vida como si fueras la única Biblia que algunas personas leerán en su vida. El pasar a un nuevo nivel con Jesucristo se inicia cuando comienzas a seguir los pasos de aquel cuyo Nombre portamos. Hoy siento que Dios me está diciendo… ________________________________________________ ________________________________________________ ________________________________________________ ________________________________________________ ________________________________________________ ________________________________________________ Mi respuesta es… ________________________________________________ ________________________________________________ ________________________________________________ ________________________________________________ ________________________________________________ ________________________________________________ Mi oración para hoy es… ________________________________________________

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________________________________________________ ________________________________________________ ________________________________________________ ________________________________________________ ________________________________________________ DÍA CINCO INTIMIDAD CON DIOS Ama al Señor tu Dios con todo tu corazón, con toda tu alma, con toda tu mente y con todas tus fuerzas” Marcos 12:30 Dios desea una comunión cercana contigo. Él quiere intimidad, de tal manera que estuvo dispuesto a sacrificar a su Hijo unigénito por tu bien. Se nos ordena amar a Dios con toda nuestra alma. Debemos amarlo con todas nuestras emociones y voluntad. Él lo quiere todo. Amar a Dios con todo tu corazón significa amarlo con cada átomo de tu ser. Esto es lo que Dios desea. Él quiere que lo ames supremamente y con todo lo que está dentro de ti. Cuando lo ames con todas tus fuerzas y cuando busques al Señor con todo tu corazón, lo encontrarás: “A los que me aman, les correspondo; a los que me buscan, me doy a conocer.” (Proverbios 8:17). Puedes conocer la increíble e íntima comunión con Cristo, pero esto requiere pasar tiempo con Él. Efesios 3: 14-19 nos dice cómo: “Por esta razón me arrodillo delante del Padre, de quien recibe nombre toda familia en el cielo y en la tierra. Le pido que, por medio del Espíritu y con el poder que procede de sus gloriosas riquezas, los fortalezca a ustedes en lo íntimo de su ser, para que por fe Cristo habite en sus corazones. Y pido que, arraigados y cimentados en amor, puedan comprender, junto con todos los santos, cuán ancho y largo, alto y profundo es el amor de Cristo; en fin, que conozcan ese amor que sobrepasa nuestro conocimiento, para que sean llenos de la plenitud de Dios.” Los creyentes deben estar enraizados y fundamentados a través de la intimidad con Dios. La comunión profunda requiere que busques conocerlo más y más. Hoy siento que Dios me está diciendo… ________________________________________________

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________________________________________________ ________________________________________________ ________________________________________________ ________________________________________________ ________________________________________________ Mi respuesta es… ________________________________________________ ________________________________________________ ________________________________________________ ________________________________________________ ________________________________________________ ________________________________________________ Mi oración para hoy es… ________________________________________________ ________________________________________________ ________________________________________________ ________________________________________________ ________________________________________________ DÍA SEIS VICTORIA A TRAVÉS DE LA RENDICIÓN Y este es su mandamiento: que creamos en el nombre de su Hijo Jesucristo, y que nos amemos los unos a los otros, pues así lo ha dispuesto. El que obedece sus mandamientos permanece en Dios, y Dios en él. ¿Cómo sabemos que él permanece en nosotros? Por el Espíritu que nos dio. 1 Juan 3:23-24

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Un instrumento se debe afinar antes de tocarlo. Un violinista, por ejemplo, sintoniza la cuerda A al tono internacional, o A-440. Eso significa que la A arriba de la C central está vibrando 440 veces por segundo. Una vez que se sintoniza la A, todas las otras cuerdas se pueden ajustar para sonar juntas armoniosamente. De lo contrario, el resultado sería una cacofonía de caos. Los violinistas saben que deben afinar las cuerdas con frecuencia, sabiendo que un golpe accidental o simplemente tocar el instrumento podría provocar una variación suficiente para causar discordancia. Del mismo modo, es fácil desconectarse como humanos. Cristo es el estándar. Si no estamos en una relación correcta con Él, no podemos llevarnos bien con los demás. O bien vibramos en armonía con Él, o nos deslizamos hacia la disonancia. ¿Como nos mantenemos en sintonia con El?

¡Obediencia! ríndete a diario. Debemos permitirle que nos sintonice con su tono perfecto. La Biblia es clara en esto: “y recibimos todo lo que le pedimos porque obedecemos sus mandamientos y hacemos lo que le agrada.” 1 Juan 3:22. Jesucristo sigue siendo la pieza central de la historia, la fuerza más poderosa conocida por la humanidad. Grandes ejércitos han ido y venido, poderosos sistemas políticos se han levantado y caído, dictadores y reyes todopoderosos se han desmoronado, pero todos ellos combinados nunca han impactado al mundo como lo hizo Jesucristo el Salvador. Él continúa cambiando hoy corazones y vidas. Y debido a que Él murió en vergüenza en la cruz, la Palabra de Dios declara que un día toda rodilla se doblará y toda lengua confesará que Él es el Señor. Podemos hacer esto ahora rindiéndonos a Él una y otra vez, en lugar de permanecer en nuestro propio tono discordante. Manténganse en sintonia al Señor: “Fijemos la mirada en Jesús, el iniciador y perfeccionador de nuestra fe, quien, por el gozo que le esperaba, soportó la cruz, menospreciando la vergüenza que ella significaba, y ahora está sentado a la derecha del trono de Dios.” (Hebreos 12:2) Hoy siento que Dios me está diciendo… ________________________________________________ ________________________________________________ ________________________________________________ ________________________________________________ ________________________________________________ ________________________________________________

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Mi respuesta es… ________________________________________________ ________________________________________________ ________________________________________________ ________________________________________________ ________________________________________________ ________________________________________________ Mi oración para hoy es… ________________________________________________ ________________________________________________ ________________________________________________ ________________________________________________ DÍA SIETE UNA VIDA DE VICTORIA ¿Es realmente posible vivir una vida sin pecado? Vivir una vida sin pecado parece tan atractivo, pero tan inalcanzable en nuestras debilidades humanas. Nuestros cuerpos de "debilidad" aún no se han elevado en "poder" (1 Corintios 15:43). Sí, tenemos la promesa de que un día nuestra corrupción se convertirá en incorrupción, y el pecado será final y completamente derrotado en nuestras vidas. Mientras tanto, se nos dice, sin embargo: “Si afirmamos que no tenemos pecado, nos engañamos a nosotros mismos y no tenemos la verdad. Si confesamos nuestros pecados, Dios, que es fiel y justo, nos los perdonará y nos limpiará de toda maldad.” (1 Juan 1: 8-9). Rendirse diariamente es la clave para una vida de victoria. El poder de vivir victoriosamente está disponible para nosotros en todo momento debido a lo que Cristo logró en la cruz del Calvario.

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El escritor del libro de los Hebreos dice, “Porque no tenemos un sumo sacerdote incapaz de compadecerse de nuestras debilidades, sino uno que ha sido tentado en todo de la misma manera que nosotros, aunque sin pecado.” (Hebreos 4:15). Por eso también puede salvar por completo a los que por medio de él se acercan a Dios, ya que vive siempre para interceder por ellos. (Hebreos 7:25). ¿Qué debemos hacer si tropezamos? la Biblia también es clara al respecto: “Si confesamos nuestros pecados, Dios, que es fiel y justo, nos los perdonará y nos limpiará de toda maldad.” (1 Juan 1:9). Confiesa tus pecados. Pide perdón. Dale la espalda a esos pecados. Entonces podrás volver a disfrutar de la comunión sin restricciones del Espíritu Santo en tu vida. John Piper, autor y maestro de la Biblia, dice: Todas las cosas fueron creadas por Él, a través de Él y para Él, incluso tus peores enemigos sobrenaturales. Al final, fueron ellos, no Cristo, quienes fueron avergonzados en la cruz (Colosenses 2:15). Al final, todo y todos sirven para magnificar la gloria de nuestro Salvador y aumentar la alegría de su pueblo en Él. Dios desea que vivamos victoriosamente, sin importar los desafíos que enfrentemos: ¡Pero gracias a Dios, que nos da la victoria por medio de nuestro Señor Jesucristo! ¡Él quiere que vivamos en victoria! Hoy siento que Dios me está diciendo… ________________________________________________ ________________________________________________ ________________________________________________ ________________________________________________ ________________________________________________ ________________________________________________ Mi respuesta es… ________________________________________________ ________________________________________________ ________________________________________________ ________________________________________________

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________________________________________________ ________________________________________________ Mi oración para hoy es… ________________________________________________ ________________________________________________ ________________________________________________ ________________________________________________ SEMANA 2: Escuchando la Voz de Dios El cristiano debe tener apetito por la oración. Debería querer orar. Uno no tiene que forzarle la comida a un niño sano. El ejercicio, la buena circulación, la salud y la mano de obra exigen alimentos para su sustento. Así es con aquellos que son espiritualmente saludables. Tienen apetito por la Palabra de Dios y por la oración. - Dr. Billy Graham DÍA OCHO ESCUCHANDO LA VOZ DE DIOS Mis ovejas oyen mi voz; yo las conozco y ellas me siguen. Juan 10:27 Hay muchas voces que claman por nuestra atención. Estas voces buscan guiar, distraer, dirigir e incluso destruir. Es importante entender esas voces y, en última instancia, aprender a discernir la verdadera voz de Dios. La voz más obvia que quiere dirigir nuestras vidas es la nuestra. La "carne" es una voz poderosa. La mente nos dice qué pensar. La voluntad nos dice lo que queremos. Las emociones nos dicen qué sentir. Según Romanos 8:5, esta voz a menudo surge de la carne humana natural: “Los que viven conforme a la naturaleza pecaminosa fijan la mente en los deseos de tal naturaleza; en cambio, los que viven conforme al Espíritu fijan la mente en los deseos del Espíritu.” Vemos imágenes, tenemos emociones y sentimientos. Los deseos están presentes en todo momento. La “carne” no es confiable, en el mejor de los casos. Otro tipo de voz que busca dirigirnos es la voz de las personas a nuestro alrededor. Dios sí habla a través de otros, pero hay muchas “otras” voces que son destructivas. ¿Cómo lo puedes saber?

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El tercer tipo de voz que vas a escuchar frecuentemente, por mucho tiempo y desde muy temprano en la vida, es la voz del enemigo de tu alma. El diablo engañó a un tercio de los ángeles del cielo, y ha perfeccionado su trama intensamente desde que engañó a Adán y a Eva. Él no necesariamente se aparece como el terror rojo de pezuña hendida con una horca. Con frecuencia se aparece por medio de nuestros pensamientos. Él distrae con un bombardeo de mensajes impíos. Busca abrumar, aterrorizar, seducir y hacer lo que sea necesario para destruirte a ti y a tus seres queridos a través de su voz. No es de extrañar que Dios nos diga: “Practiquen el dominio propio y manténganse alerta. Su enemigo el diablo ronda como león rugiente, buscando a quién devorar.” (1 Pedro 5:8). La voz de Dios, afortunadamente, está asegurada para cada uno de nosotros que invocamos su nombre. Sin embargo, su voz es a menudo la más sutil de todas las voces, ya que busca hablar a través del espíritu de cada persona, no a través del clamor de la carne y las voces externas. Queremos escuchar a Dios a través de palabras sobrenaturales, espectaculares, sensacionales y brillantes; pero Él rara vez habla de esa manera. Dios busca dirigir nuestros caminos a través de Su presencia, Su Palabra, la oración, Su Espíritu e incluso a veces a través de las circunstancias. Sin embargo, para escuchar su voz, debemos aprender a ir más allá de la superficie e ir más profundo donde el Espíritu de Dios vive dentro de nosotros. Hoy siento que Dios me está diciendo… ________________________________________________ ________________________________________________ ________________________________________________ ________________________________________________ ________________________________________________ ________________________________________________ Mi respuesta es… ________________________________________________ ________________________________________________ ________________________________________________ ________________________________________________ ________________________________________________ ________________________________________________

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Mi oración para hoy es… ________________________________________________ ________________________________________________ ________________________________________________ ________________________________________________ DIA NUEVE

EL CAMINO A LA SABIDURÍA Mi padre me instruyó de esta manera: «Aférrate de corazón a mis palabras; obedece mis mandamientos, y vivirás. Adquiere sabiduría, adquiere inteligencia; no olvides mis palabras ni te apartes de ellas. No abandones nunca a la sabiduría, y ella te protegerá; ámala, y ella te cuidará. La sabiduría es lo primero. ¡Adquiere sabiduría! Por sobre todas las cosas, adquiere discernimiento. Proverbios 4:4-7 Dios busca guiarnos a través de su voz. La sabiduría de Dios es el mejor camino hacia una vida abundante. Un camino o sendero es un ejemplo común en toda la Biblia. La sabiduría nos permite caminar erguidos para no tropezar con los caminos de la vida. Sabiduría significa escuchar y hacer la Palabra de Dios mientras caminas en fe. Es por eso que el temor del Señor es el comienzo de toda verdadera sabiduría. ¿A dónde lleva el camino? En otras palabras, ¿cómo se obtiene la sabiduría? Estas son algunas de las mejores señales que verás en el camino: Comprende el hecho de que la verdadera sabiduría proviene de Dios. Proverbios 2:26 declara: “Porque el Señor da la sabiduría; conocimiento y ciencia brotan de sus labios.” Pídele a Dios que te dé sabiduría. Santiago 1:5 declara: “Si a alguno de ustedes le falta sabiduría, pídasela a Dios, y él se la dará, pues Dios da a todos generosamente sin menospreciar a nadie.” ¡Si quieres sabiduría, pídesela! Desea la sabiduría con todo tu corazón. La sabiduría debe ser algo valioso para ti. Por esta razón Salomón escribió, si llamas a la inteligencia y pides discernimiento; si la buscas como a la plata, como a un tesoro escondido, entonces comprenderás el temor del Señor y hallarás el conocimiento de Dios. (Proverbios 2:3-5) Aplícate al estudio y comprensión de la Palabra de Dios. Salmos 19:7 nos dice, “La ley del Señor es perfecta: infunde nuevo aliento. El mandato del Señor es digno de confianza: da sabiduría al

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sencillo.” Cuanto más te dedicas a la Santa Palabra de Dios, te abres a la sabiduría más grande del universo. ¿Quieres escuchar la voz de Dios? Confía en el Señor de todo corazón, y no en tu propia inteligencia. Reconócelo en todos tus caminos, y él allanará tus sendas. (Proverbios 3:5-6). Busca la sabiduría de Dios. Hoy siento que Dios me está diciendo… ________________________________________________ ________________________________________________ ________________________________________________ ________________________________________________ ________________________________________________ ________________________________________________ Mi respuesta es… ________________________________________________ ________________________________________________ ________________________________________________ ________________________________________________ ________________________________________________ ________________________________________________ Mi oración para hoy es… ________________________________________________ ________________________________________________ ________________________________________________ ________________________________________________

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Dia Diez

Entrando en la Presencia de Dios Oh Dios, tú eres mi Dios; yo te busco intensamente. Mi alma tiene sed de ti; todo mi ser te anhela, cual tierra seca, extenuada y sedienta. Te he visto en el santuario y he contemplado tu poder y tu gloria. Tu amor es mejor que la vida; por eso mis labios te alabarán. Salmos 63:1-3 A lo largo del Antiguo Testamento, se nos da una ilustración poderosa: Dios proveyó el Tabernáculo y el Templo en su deseo de que los creyentes de hoy puedan acercarse al Lugar Santísimo. El salmista David sabía, como debemos aprender, que el movimiento inicial hacia la verdadera intimidad con Dios fue pasar de la "carne" al "alma". La carne se compara con el sacrificio por los pecados en el patio exterior del tabernáculo del Antiguo Testamento, lo cual todos los hebreos estudiosos sabían. Dentro de la tienda sagrada, cercada por el patio exterior, estaba el patio interior, o el Lugar Santo, el lugar del alma o el deseo interior. El Lugar Santo tenía veinte codos de largo y diez de ancho. Contenía la mesa del pan de la proposición, el candelabro de oro y el altar del incienso, cada uno con un significado específico. Dentro del Lugar Santo, de diez codos cuadrados, estaba el Lugar Santísimo, que contenía el arca del pacto, un cofre sagrado que era un símbolo de la presencia divina de Dios. Un velo de material muy costoso separó el Lugar Santísimo del Lugar Santo. A nadie, excepto al sumo sacerdote, se le permitió ingresar al Lugar Santísimo, y solo se le permitió ingresar una vez al año en el Día de la Expiación. Todo cambió para los creyentes en el Calvario: “Entonces Jesús volvió a gritar con fuerza, y entregó su espíritu. En ese momento la cortina del santuario del templo se rasgó en dos, de arriba abajo. La tierra tembló y se partieron las rocas.” (Mateo 27:50-51) La muerte de Cristo marcó la apertura de un nuevo y vivo camino hacia Dios. Antes, el velo impedía que la gente entrara al lugar más sagrado donde estaba la Shekinah. El precio de su presencia fue pagado en su totalidad, sin embargo, muy pocos creyentes están dispuestos a hacer lo que se requiere para entrar al Lugar Santísimo. Comienza con sed y hambre para un peregrinaje de intimidad con Él. “Así que acerquémonos confiadamente al trono de la gracia para recibir misericordia y hallar la gracia que nos ayude en el momento que más la necesitemos.” (Hebreos 4:16) Anhela acercarte a Él, sin importar el precio. Hoy siento que Dios me está diciendo… ________________________________________________ ________________________________________________

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ESCUCHANDO A TRAVÉS DE LA PALABRA DE DIOS El rey Salomón, nombre sinónimo de la sabiduría, una vez escribió, Gloria de Dios es ocultar un asunto, y gloria de los reyes el investigarlo. (Proverbios 25:2). La gloria de Dios se oculta a través de Su Palabra, pero el creyente puede ver Su gloria revelada a través de una cuidadosa búsqueda de esa Palabra. La Palabra de Dios es un tesoro por descubrir. La verdad profunda no siempre se puede extraer simplemente rascando la superficie. Al parecer, en todas partes, el Padre ha dado una guía que apunta hacia el tesoro supremo, Su Hijo, Jesucristo.

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Para extraer estas riquezas eternas, incluso con las primeras joyas u minerales preciosos, es necesario excavar debajo de la superficie. Por eso es tan importante pedirle al Padre que brinde sabiduría sobrenatural a medida que busca en la Palabra recursos frescos, inestimables y que den vida todos los días. La Palabra de Dios es una lámpara para nuestros pies y una luz para nuestros caminos: Tú, Señor, mantienes mi lámpara encendida; tú, Dios mío, iluminas mis tinieblas. Con tu apoyo me lanzaré contra un ejército; contigo, Dios mío, podré asaltar murallas. El camino de Dios es perfecto; la palabra del Señor es intachable. Escudo es Dios a los que en él se refugian. ¿Quién es Dios, si no el Señor? ¿Quién es la roca, si no nuestro Dios? (Salmos 18:28-31) La Palabra de Dios puede iluminar nuestra vida hoy: En el principio ya existía el Verbo, y el Verbo estaba con Dios, y el Verbo era Dios. Él estaba con Dios en el principio. Por medio de él todas las cosas fueron creadas; sin él, nada de lo creado llegó a existir. En él estaba la vida, y la vida era la luz de la humanidad. (John 1:1-4) Pase tiempo cada día leyendo la Palabra de Dios, porque ese el camino hacia la voluntad y dirección de Dios, llevándonos de un lugar de incertidumbre a una gloriosa cima de la victoria. La Biblia nos conformará a la imagen de nuestro Salvador mientras buscamos escuchar la voz de Dios. Hoy siento que Dios me está diciendo… ________________________________________________ ________________________________________________ ________________________________________________ ________________________________________________ ________________________________________________ ________________________________________________ Mi respuesta es… ________________________________________________ ________________________________________________ ________________________________________________ ________________________________________________

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________________________________________________ ________________________________________________ Mi oración para hoy es… ________________________________________________ ________________________________________________ ________________________________________________ ________________________________________________ DÍA DOCE

ESCUCHANDO A TRAVÉS DE LA ORACIÓN Oren sin cesar. 1 Tesalonicenses 5:17 Una historia cuenta que durante la Primera Guerra Mundial, un soldado británico fue atrapado una noche mientras se arrastraba sigilosamente a su tienda desde una zona boscosa cercana. Fue inmediatamente llevado ante su oficial de mando y acusado de mantener comunicaciones con el enemigo. El hombre suplicó que había ido al bosque a orar. Esa fue su única defensa. "¿Has tenido la costumbre de pasar horas en oración privada?" preguntó su oficial con rudeza. "Sí señor." "¡Entonces ponte de rodillas y ora ahora como nunca has orado antes!" ordenó el comandante. El joven sabía que podía ser fusilado al amanecer por el crimen que le acusaron de cometer. Se arrodilló y derramó su alma en una poderosa oración que solo pudo haber sido inspirada por el Espíritu Santo. "Puedes irte", dijo el oficial en voz baja después de que el soldado terminó de orar. "Creo su historia. Si no hubiera practicado a menudo, no podría haberlo hecho tan bien en la prueba". El joven tuvo un gran avance que le salvó la vida. Lo hizo porque se había preparado para ese avance durante algún tiempo, sin saber qué desafíos enfrentaría. Había aprendido a comunicarse con Dios íntimamente. La oración trae una auto-revelación, permitiendo que nos veamos a nosotros mismos a la luz de quién es Dios. Esta auto-revelación siempre es seguida por una revelación de Dios y su misericordia.

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La oración trae limpieza. Cuando confiesas tus pecados, Él te limpia, permitiendo que vengas valientemente al trono de la gracia con un corazón puro. La oración revela la Palabra de Dios, permitiendo que Él guíe, dirija e ilumine nuestros caminos. Salmos 119:18 nos dice, Ábreme los ojos, para que contemple las maravillas de tu ley...” Hoy siento que Dios me está diciendo… ________________________________________________ ________________________________________________ ________________________________________________ ________________________________________________ ________________________________________________ ________________________________________________ Mi respuesta es… ________________________________________________ ________________________________________________ ________________________________________________ ________________________________________________ ________________________________________________ ________________________________________________ Mi oración para hoy es… ________________________________________________ ________________________________________________ ________________________________________________ ________________________________________________ DÍA TRECE

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ESCUCHANDO AL ESPÍRITU DE DIOS Y, si el Espíritu de aquel que levantó a Jesús de entre los muertos vive en ustedes, el mismo que levantó a Cristo de entre los muertos también dará vida a sus cuerpos mortales por medio de su Espíritu, que vive en ustedes. Por tanto, hermanos, tenemos una obligación, pero no es la de vivir conforme a la naturaleza pecaminosa. Porque, si ustedes viven conforme a ella, morirán; pero, si por medio del Espíritu dan muerte a los malos hábitos del cuerpo, vivirán. Porque todos los que son guiados por el Espíritu de Dios son hijos de Dios. Y ustedes no recibieron un espíritu que de nuevo los esclavice al miedo, sino el Espíritu que los adopta como hijos y les permite clamar: «¡Abba! ¡Padre!» El Espíritu mismo le asegura a nuestro espíritu que somos hijos de Dios. Romanos 8:11-16 Escuchar su voz trae felicidad, paz, dirección y abundancia. Si realmente quieres entender cómo habla el Espíritu Santo, lee y relee estas profundas palabras que se encuentran en Romanos 8. ¿Cómo escuchas al Espíritu de Dios? Pablo el apóstol proclamó: “Que la gracia del Señor Jesucristo, el amor de Dios y la comunión del Espíritu Santo sean con todos ustedes.” (2 Corintios 13:14). ¿Qué quiso decir él? • La comunión requiere pasar tiempo en su presencia. • La comunión significa compartir con Él, derramar nuestros corazones y escucharlo. • La comunión implica participar con Él. El Espíritu Santo quiere convertirse en nuestro socio en todo lo que hacemos. • La comunión requiere intimidad. Dios ha elegido derramar su amor “en nuestro corazón por el Espíritu Santo que nos ha dado.” (Romanos 5:5) • La comunión incluye amistad. El Espíritu Santo anhela ser nuestro amigo más cercano, alguien con quien podamos compartir nuestros secretos más profundos. • La comunión también implica camaradería. Uno de los significados griegos de "comunión" es "comandante". El Espíritu Santo quiere ser nuestro capitán, un comandante cariñoso y amigable, instruyendo lo que debemos hacer y hacia dónde debemos ir. • El compañerismo da poder para compartir lo que Dios ha hecho en nuestras vidas. Jesús dijo, “Pero, cuando venga el Espíritu Santo sobre ustedes, recibirán poder y serán mis testigos tanto en Jerusalén como en toda Judea y Samaria, y hasta los confines de la tierra.” (Hechos 1:8). ¿Estás escuchando Su voz? El reconocimiento de Su voz requiere que la escuches frecuentemente. Busca tener comunión con Él, invítalo en cada área de tu vida. Hoy siento que Dios me está diciendo… ________________________________________________ ________________________________________________ ________________________________________________

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________________________________________________ ________________________________________________ ________________________________________________ Mi respuesta es… ________________________________________________ ________________________________________________ ________________________________________________ ________________________________________________ ________________________________________________ ________________________________________________ Mi oración para hoy es… ________________________________________________ ________________________________________________ ________________________________________________ DÍA CATORCE

ESCUCHAR A DIOS POR MEDIO DE LAS CIRCUNSTANCIAS Después de que Jesús nació en Belén de Judea en tiempos del rey Herodes, llegaron a Jerusalén unos sabios procedentes del Oriente. —¿Dónde está el que ha nacido rey de los judíos? —preguntaron—. Vimos levantarse su estrella y hemos venido a adorarlo. Después de oír al rey, siguieron su camino, y sucedió que la estrella que habían visto levantarse iba delante de ellos hasta que se detuvo sobre el lugar donde estaba el niño. Al ver la estrella, se llenaron de alegría. Mateo 2:1-2, 9-10 Qué conjunto tan inusual de "circunstancias" diseñó Dios para guiar a los sabios al nacimiento de Cristo. El planeta más cercano a la Tierra está a treinta y siete millones de millas de distancia. La estrella más cercana está a veinticinco mil millones de millas de distancia. Cualquier luz que vieron los sabios, viajando a 186,000 millas por segundo, habría explotado al menos cinco años antes del nacimiento de Cristo para que la explosión alcanzara la tierra. Algunos llamarían a esta estrella una mera "circunstancia". ¡Nosotros sabemos la verdad! Así como Dios le dio a los sabios un camino iluminado hacia el Hijo de Dios, en su plan perfecto, podemos confiar en el camino que Él nos da.

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Proverbios 3:5-6 nos dice, “Confía en el Señor de todo corazón, y no en tu propia inteligencia. Reconócelo en todos tus caminos, y él allanará tus sendas.” Ese pasaje nos asegura que si en realidad queremos conocer la voluntad de Dios y se lo pedimos, ¡Él se asegurara de que nosotros la entendamos! La única vía hacia la victoria para llegar a la meta como creyentes es confiar en que Dios nos mantenga y nos guíe momento a momento, sin ser regidos por las circunstancias. Dicho en una manera sencilla, nosotros tenemos la opción de confiar solamente en nuestros juicios realizados sobre lo que hemos obtenido de la mejor manera, o en los juicios realizados sobre las decisiones basadas en los hechos de la dirección de Dios. Nosotros podemos discernir la mano de Dios por medio de circunstancias positivas y negativas. Sin embargo, las circunstancias no siempre son una indicación del plan de Dios sobre nuestras vidas. La madurez llega a los creyentes que cada vez son menos vulnerables a las circunstancias, porque conocemos la promesa en Salmos 37:23-24: “El Señor afirma los pasos del hombre cuando le agrada su modo de vivir; podrá tropezar, pero no caerá, porque el Señor lo sostiene de la mano.” Cualesquiera que sean las circunstancias, podemos estar seguros que Dios está en control. Hoy siento que Dios me está diciendo… ________________________________________________ ________________________________________________ ________________________________________________ ________________________________________________ ________________________________________________ ________________________________________________ Mi respuesta es… ________________________________________________ ________________________________________________ ________________________________________________ ________________________________________________ ________________________________________________

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________________________________________________ Mi oración para hoy es… ________________________________________________ ________________________________________________ ________________________________________________ ________________________________________________ SEMANA 3: OBEDIENCIA A DIOS ¡Conocer la voluntad de Dios es el mayor conocimiento! ¡Hacer la voluntad de Dios es el mayor logro! George W. Truett DÍA QUINCE

COMPRENDIENDO EL PLAN DE DIOS Así que no se preocupen diciendo: “¿Qué comeremos?” o “¿Qué beberemos?” o “¿Con qué nos vestiremos?” Los paganos andan tras todas estas cosas, pero el Padre celestial sabe que ustedes las necesitan. Más bien, busquen primeramente el reino de Dios y su justicia, y todas estas cosas les serán añadidas. Mateo 6:31-33 Sabemos por la Palabra de Dios que a Él le importan las cosas que nos preocupan y las decisiones que enfrentamos todos los días, tanto grandes como pequeñas. Él entiende lo que nos motiva y conoce nuestras necesidades. Del mismo modo, se preocupa por las opciones que enfrentamos: ¡Este Dios es nuestro Dios eterno! ¡Él nos guiará para siempre! (Salmos 48:14). Más importante aún, Él desea que tomemos decisiones que reflejen su voluntad en nuestras vidas: “Por tanto, no sean insensatos, sino entiendan cuál es la voluntad del Señor.” (Efesios 5:17).

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Con estos versículos en mente, aquí hay tres principios sencillos para conocer el plan de Dios para nuestras vidas: La voluntad de Dios está disponible solo a través del Señor Jesucristo. Mientras el mundo busca orientación a través de una mezcla de creencias y rituales, el Salvador se proclama a sí mismo de una manera clara que no deja margen para el error o la mala interpretación: “—Yo soy el camino, la verdad y la vida —le contestó Jesús—. Nadie llega al Padre sino por mí.” (Juan 14:6). Para reconocer la voluntad de Dios en tu vida, primero debes ofrecer tu vida a Dios. El apóstol Pablo escribió: “Por lo tanto, hermanos, tomando en cuenta la misericordia de Dios, les ruego que cada uno de ustedes, en adoración espiritual, ofrezca su cuerpo como sacrificio vivo, santo y agradable a Dios (Romanos 12:1). Nosotros debemos estar dispuestos a ser sacrificios vivos antes de ser usados por Él en Su servicio. Solamente después de esto podremos comprender el diseño para nuestras vidas. Para conocer la voluntad de Dios, debemos renovar la mente de una manera sobrenatural. Romanos nos dice: “No se amolden al mundo actual, sino sean transformados mediante la renovación de su mente. Así podrán comprobar cuál es la voluntad de Dios, buena, agradable y perfecta.” A medida que, de una forma constante, nos presentemos a Dios al pasar tiempo con Él y leyendo Su Palabra, entonces Él podrá transformarnos y mostrarnos Su plan. El plan de Dios es perfecto y completo. Él busca llevar a cada creyente a Su perfecta voluntad. Debemos orar junto el salmista, “Enséñame a hacer tu voluntad, porque tú eres mi Dios. Que tu buen Espíritu me guíe por un terreno sin obstáculos.” (143:10). Hoy siento que Dios me está diciendo… ________________________________________________ ________________________________________________ ________________________________________________ ________________________________________________ ________________________________________________ ________________________________________________ Mi respuesta es… ________________________________________________ ________________________________________________

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________________________________________________ ________________________________________________ ________________________________________________ ________________________________________________ Mi oración para hoy es… ________________________________________________ ________________________________________________ ________________________________________________ ________________________________________________ DÍA DIECISÉIS

PARTICIPANDO EN EL PLAN DE DIOS El Dios que da la paz levantó de entre los muertos al gran Pastor de las ovejas, a nuestro Señor Jesús, por la sangre del pacto eterno. Que él los capacite en todo lo bueno para hacer su voluntad. Y que, por medio de Jesucristo, Dios cumpla en nosotros lo que le agrada. A él sea la gloria por los siglos de los siglos. Amén. Hebreos 13:20-21 Arquímedes, al descubrir el poder de la palanca, dijo: "Si me encuentras un punto de apoyo para apoyar mi palanca, puedo mover el mundo". Dios desea llegar al mundo, pero ha elegido usarnos para ser sus manos extendidas. Sin embargo, participar en su plan requiere fe en su plan y una creencia activa que nos ayuda a llevarlo a cabo. Uno de los significados griegos de las palabras del Nuevo Testamento, fe y creer, es palanca. Con fe, tenemos una palanca. Con ese punto de apoyo podemos participar en el plan de Dios con una fe que mueve montañas. ¿Cómo? Debemos entender que hay una diferencia entre fe y creer. Esa diferencia significa todo cuando buscamos participar en el plan de Dios. Creer es la fe activa. Significa aplicar la verdad. La fe nos ayuda a confiar en Dios y a ejercer lo que sabemos que es verdad. La fe es un regalo de Dios, pero creer requiere nuestra voluntad. La fe es el regalo de Dios, así como lo es respirar, caminar, oír y ver son regalos. Sin embargo, así como Dios no respira, camina, escucha o ve por nosotros, tampoco cree por nosotros. Nos ha dado la capacidad de creer en Él y nos exige que participemos activamente en lo que Él nos indique que hagamos.

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La fe y la creencia se fortalecen a medida que las ejercitas. También tienden a debilitarse cuando los descuidas. Aquellos que participan activamente en el plan de Dios ciertamente se fortalecerán. La fe y creer no están limitados; por eso es que Jesús nos dice, “Para los hombres es imposible —aclaró Jesús, mirándolos fijamente—, más para Dios todo es posible” (Mateo 19:26). Tome a Dios en su palabra al recibir su don de fe, luego comience a aprovechar el mundo a medida que cree y participe más y más en su plan. Hoy siento que Dios me está diciendo… ________________________________________________ ________________________________________________ ________________________________________________ ________________________________________________ ________________________________________________ ________________________________________________ Mi respuesta es… ________________________________________________ ________________________________________________ ________________________________________________ ________________________________________________ _______________________________________________ ________________________________________________ Mi oración para hoy es… ________________________________________________ ________________________________________________ ________________________________________________

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________________________________________________ DÍA DIECISIETE

PARADO SOBRE LA ROCA Sólo Él es mi roca y mi salvación; Él es mi protector y no habré de caer. Salmos 62:6 El gran maestro de la Biblia, Smith Wigglesworth, una vez escribió: Nada en el mundo glorifica tanto a Dios como una simple confianza de fe en lo que dice la Palabra de Dios. "Este es el trabajo de Dios, que tú creas". Jesús dijo, “Mi Padre aún hoy está trabajando, y yo también trabajo.” (Juan 5:17). Vio la forma en que el Padre hacía las palabras; estaba en la base del conocimiento, la fe basada en el conocimiento. Cuando lo conozco, hay tantas promesas que puedo alcanzar, y luego no hay lucha, “Porque todo el que pide, recibe; el que busca, encuentra; y al que llama, se le abre” (Mateo 7:8). Los problemas van y vienen todo el tiempo. Las cosas cambian. Es por eso que debemos decir, con el apóstol Pablo, “Pero no me avergüenzo, porque sé en quién he creído, y estoy seguro de que tiene poder para guardar hasta aquel día lo que le he confiado.” (2 Timoteo 1:12). ¡La obediencia a Dios no requiere nada menos! Hay un momento en el que nadie puede animarnos como nosotros podemos animarnos a nosotros mismos, buscando en el fondo la provisión secreta e inquebrantable de Dios. La gente puede hablar y aconsejarnos. Pueden orar por nosotros y agradecer a Dios por esa ayuda externa. Pero eventualmente todo se reduce a nuestra relación directa, insondable, íntima y sólida con el Creador. Con demasiada frecuencia, las personas tienen un punto de vista horizontal, externo, no vertical, interno. Analizan cada problema: el precio del combustible, las estadísticas de desempleo, los mercados siempre fluctuantes, las guerras, el Medio Oriente, las tasas de criminalidad y mucho más. No es de extrañar que la gente se revuelva en angustia, deudas y descontento. Cuando observamos las peores cosas, especialmente todos los problemas externos, encontramos que las cosas empeoran. Pero Dios ha dado una mejor manera, una nueva revelación, construida sobre la Roca de nuestra salvación: “Por lo tanto, ustedes ya no son extraños ni extranjeros, sino conciudadanos de los santos y miembros de la familia de Dios, edificados sobre el fundamento de los apóstoles y los profetas, siendo Cristo Jesús mismo la piedra angular” (Efesios 2:19-20). Hoy siento que Dios me está diciendo… ________________________________________________

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LECCIONES DE PACIENCIA Y PERSEVERANCIA QUE NO TIENEN PRECIO Jesús les contó a sus discípulos una parábola para mostrarles que debían orar siempre, sin desanimarse. Les dijo: «Había en cierto pueblo un juez que no tenía temor de Dios ni consideración de nadie. En el mismo pueblo había una viuda que insistía en pedirle: “Hágame usted justicia contra mi adversario”. Durante algún tiempo él se negó, pero por fin concluyó: “Aunque no temo a Dios ni tengo consideración de nadie, como esta viuda no deja de

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molestarme, voy a tener que hacerle justicia, no sea que con sus visitas me haga la vida imposible”». Lucas 18:1-5 Vivimos en un mundo "instantáneo". Tenemos poca tolerancia para cualquier cosa que requiera paciencia o perseverancia. Por lo tanto, tal vez no sea sorprendente que con demasiada frecuencia los creyentes tengan la actitud de que nuestra relación con Dios debería ser algo así como una máquina expendedora cósmica "¡Hazlo, Señor, ¡AHORA!" Nos sentimos tan motivados a ver resultados instantáneos que olvidamos que el tiempo de Dios y su providencia divina siempre son perfectos. No nos acordamos de que su sabiduría infinita no debe ser desafiada por nuestro razonamiento y expectativas humanas y finitas. Una forma importante de obedecer a Dios es no darse por vencido, incluso cuando la fe no es recompensada al instante. Jesús creía en la perseverancia. Una de sus parábolas fue dada para enseñarnos que no debemos rendirnos y desanimarnos. Contó la historia de una viuda que acudió a un juez malvado. Su petición fue que él de alguna manera le obtuviera justicia. El juez, demasiado ocupado o desinteresado en el caso, dijo "¡Vete!" ¿Cuál fue la respuesta de la mujer? Ella declaró firmemente: "No, no me iré hasta que hagas lo que te pido". Finalmente, debido a su tenacidad, el juez acordó escuchar su caso porque ella no se rendiría. Después de contar esta historia, Jesús dijo: Continuó el Señor: «Tengan en cuenta lo que dijo el juez injusto. ¿Acaso Dios no hará justicia a sus escogidos, que claman a él día y noche? ¿Se tardará mucho en responderles? (Lucas 18:6-7). Cristo nunca criticó a la mujer en la parábola porque ella era implacable. No dijo que le faltara fe. Elogió lo que ella hizo. Mantenga sus peticiones constantemente delante del Señor. No te rindas; no dejes de pedir; no dejes de buscar; no dejes de llamar a la puerta de tu Padre. Hoy siento que Dios me está diciendo… ________________________________________________ ________________________________________________ ________________________________________________ ________________________________________________ ________________________________________________

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________________________________________________ Mi respuesta es… ________________________________________________ ________________________________________________ ________________________________________________ ________________________________________________ ________________________________________________ ________________________________________________ Mi oración para hoy es… ________________________________________________ ________________________________________________ ________________________________________________ ________________________________________________ DÍA DIECINUEVE

OBEDIENCIA A LA PALABRA DE DIOS La ley del Señor es perfecta: infunde nuevo aliento. El mandato del Señor es digno de confianza: da sabiduría al sencillo. Salmos 19:7 Los mapas son útiles. El sistema de posicionamiento global es aún más increíble. Sin embargo, ambos palidecen en comparación con el increíble mapa espiritual – el “GPS” disponible a través de la Palabra de Dios. Cuanto más nos dedicamos a la Santa Palabra de Dios, más nos abrimos a la mayor sabiduría del universo. Cuanto más sabios nos volvemos, más nos damos cuenta de que Dios requiere obediencia a Sus instrucciones. El significado hebreo de la sabiduría incluye separarse para Dios, abrir su vida hacia Él y permitirle que le revele su mapa. A lo largo de las Escrituras, la sabiduría y la obediencia están unidas. Moisés, por ejemplo, nos enseñó que la sabiduría consiste en conocer y cumplir los mandamientos de Dios. Dice Deuteronomio 4: 5-6:

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» Miren, yo les he enseñado los preceptos y las normas que me ordenó el Señor mi Dios, para que ustedes los pongan en práctica en la tierra de la que ahora van a tomar posesión. Obedézcanlos y pónganlos en práctica; así demostrarán su sabiduría e inteligencia ante las naciones. Ellas oirán todos estos preceptos, y dirán: “En verdad, este es un pueblo sabio e inteligente; ¡esta es una gran nación!” En esencia, Jesucristo dijo lo mismo en Mateo 7:24: “Por tanto, todo el que oye estas palabras y las pone en práctica es como un hombre prudente que construyó su casa sobre la roca.” La sabiduría divina significa escuchar y hacer la palabra de Dios. Las personas que lo obedecen y se humillan ante Él entienden el hecho de que el temor del Señor es el principio, el origen y la fuente interminable de toda la sabiduría verdadera. Si quiere que Dios trabaje a su favor, el primer paso es la obediencia total a Su Palabra. La gente suele citar a Juan 8:32 “conocerás la verdad, y la verdad te hará libre.” Pero el versículo anterior es poco citado “—Si se mantienen fieles a mis enseñanzas, serán realmente mis discípulos” ¡Mantente aferrado a Su enseñanza y obedece Su Palabra! Hoy siento que Dios me está diciendo… ________________________________________________ ________________________________________________ ________________________________________________ ________________________________________________ ________________________________________________ ________________________________________________ Mi respuesta es… ________________________________________________ ________________________________________________ ________________________________________________ ________________________________________________ ________________________________________________ ________________________________________________

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Mi oración para hoy es… ________________________________________________ ________________________________________________ ________________________________________________ ________________________________________________ DÍA VEINTE

EL PODER DEL ACUERDO “Además les digo que, si dos de ustedes en la tierra se ponen de acuerdo sobre cualquier cosa que pidan, les será concedida por mi Padre que está en el cielo. Porque donde dos o tres se reúnen en mi nombre, allí estoy yo en medio de ellos”. Mateo 18:19-20. Muchas personas leen Mateo 18:19-20, pero son negligentes con lo que Jesús enseño en el versículo anterior: “Les aseguro que todo lo que ustedes aten en la tierra quedará atado en el cielo, y todo lo que desaten en la tierra quedará desatado en el cielo.” Así como Jesús enseñó, el acuerdo es la clave para liberar el poder del Todopoderoso. Es a través del acuerdo con Dios y su pueblo que nos movemos de lo natural a lo sobrenatural, de lo ordinario a lo extraordinario. ¿Cuán importante es la unidad de los creyentes? En toda la Biblia, cuando las personas se unieron, los resultados fueron notables: • Moisés se unió a Aarón y Hur para obtener grandes victorias. • Noemí y Rut recibieron una respuesta de Dios • David hizo un pacto con Jonatán. • Jesús ministró con sus discípulos. • Las oraciones de Pablo y Silas trajeron liberaciones. ¿Es de extrañar por qué la Biblia nos exhorta a llegar a un acuerdo mutuo? Eche un vistazo al Nuevo Testamento y vea con qué frecuencia nos dice cosas como: • “Ámese el uno al otro” (Juan 13:34). • “Sírvanse unos a otros con amor” (Gálatas 5:13). • “Sean humildes y amables, pacientes, tolerantes unos con otros” (Efesios 4:2). • “Perdónese … uno al otro” (Colosenses 3:13). • “Anímense unos a otros” (1 Tesalonicenses 4:18). • “Edifíquense unos a otros” (1 Tesalonicenses 5:11). • “Estimúlense uno a otro” (Hebreos 10:24).

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A través de las Escrituras, se nos habla sobre la importancia del acuerdo. La Unidad es mandada por Cristo: “este mandamiento nuevo les doy: que se amen los unos a los otros. Así como yo los he amado, también ustedes deben amarse los unos a los otros.” (Juan 13:34). Jesús oro, “…para que todos sean uno. Padre, así como tú estás en mí y yo en ti, permite que ellos también estén en nosotros, para que el mundo crea…” (Juan 17:21). Hoy siento que Dios me está diciendo… ________________________________________________ ________________________________________________ ________________________________________________ ________________________________________________ ________________________________________________ ________________________________________________ Mi respuesta es… ________________________________________________ ________________________________________________ ________________________________________________ ________________________________________________ ________________________________________________ ________________________________________________ Mi oración para hoy es… ________________________________________________ ________________________________________________ ________________________________________________ ________________________________________________ DÍA VEINTIUNO

OBEDIENCIA A PESAR DE LO QUE PASE

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La obediencia, pase lo que pase, da una visión más aguda y una fe determinada. Cuando John y Charles Wesley se encontraron y escucharon al general James Oglethorpe, fundador y gobernador de Georgia, hablar sobre la vida en Estados Unidos con los nativos y pioneros, decidieron ir y llevar el Evangelio de Jesucristo a la nueva tierra. El resultado fue: Charles, que fue secretario del gobernador, cayó enfermo. A John, que fue a predicar, le fue aún peor. A los pioneros no les gustaba su predicación o sus gestos, y los nativos no estaban convencidos. Cuando los hermanos regresaron a Inglaterra, deberían haber sido aplastados por el fracaso abrumador y muy publicitado. En cambio, era evidente, para todos los que los conocían, que su visión ardía más que nunca, pues se había enfocado y agudizado por el fuego que habían soportado. El Dios de segundas oportunidades dirigió la atención de los Wesley hacia Inglaterra, un país degradado. En ese momento, cada sexta casa en Londres era una taberna. La embriaguez, el abandono de niños, las bandas de gamberros y el crimen estaban en todas partes. La iglesia se había convertido en un club social frío de cazadores de zorras, las clases altas se reían de ella y las clases bajas la ignoraban como irrelevante. Una vez más, los hermanos Wesley parecían estar destinados al fracaso. Su estilo de predicación fue recibido con abucheos. Les arrojaron piedras, barro y huevos podridos. Sin embargo, había algo diferente esta vez. John literalmente saltó a la silla de montar, viajando por Inglaterra, predicando hasta cinco sermones al día durante más de cincuenta años. Su mensaje a los ricos y pobres fue el mismo: "¡Arrepiéntete y sé salvo!" Hizo de la fe en Cristo una realidad viva. La nación comenzó a conmoverse. Uno de sus conversos, Robert Raikes, formó la primera escuela dominical, un movimiento que se extendió a todo el país y al extranjero. La sociedad comenzó a ver la necesidad de ayudar a los niños abandonados, los necesitados, los analfabetos y los prisioneros. El Evangelio no solo ardió y se extendió como fuego, rápidamente en toda Inglaterra, sino que el mensaje de fe encendió una llama que rodeó el globo. Gran parte de lo que hoy se está haciendo es el resultado del hecho de que John y Charles Wesley, como Jonás de antaño, escucharon la Palabra del Señor cuando llegó la segunda vez. Hoy siento que Dios me está diciendo… ________________________________________________ ________________________________________________ ________________________________________________ ________________________________________________

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________________________________________________ ________________________________________________ Mi respuesta es… ________________________________________________ ________________________________________________ ________________________________________________ ________________________________________________ ________________________________________________ ________________________________________________ Mi oración para hoy es… ________________________________________________ ________________________________________________ ________________________________________________ ________________________________________________ SEMANA 4: LA INTERVENCIÓN DE DIOS Que el Todopoderoso haga uso de las agencias humanas e intervenga directamente en los asuntos humanos, es una de las declaraciones más claras de la Biblia. He tenido tantas evidencias de su dirección, tantos casos en que he sido controlado por otro poder que no es mi propia voluntad, que no puedo dudar de que este poder viene de arriba. - Presidente Abraham Lincoln

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DÍA VEINTIDÓS

EL DIOS DE MILAGROS Pueblo de Israel, escuchen esto: Jesús de Nazaret fue un hombre acreditado por Dios ante ustedes con milagros, señales y prodigios, los cuales realizó Dios entre ustedes por medio de él, como bien lo saben. Hechos 2:22 Ahora tenemos una verdad estricta en cuanto a datos sobre préstamos, información de contenido de productos, datos nutricionales, cifras de estimaciones de servicios, estadísticas del consumidor y más. La gente de hoy quiere ver lo que están recibiendo. Quieren los hechos ante sus ojos. ¿Es acaso de extrañar que el mundo desee ver verdaderos cristianos que reflejen un Dios de los Milagros? Jesús vivió en medio de los milagros durante su ministerio de tres años en la tierra. Las cosas que hizo: la resurrección de Lázaro, la curación de los ciegos, la restauración del maníaco, no pudieron haberse hecho a través del poder humano. Realizó estos milagros, no en secreto, sino ante amigos, familiares, enemigos, buscadores de fallas, caídas y exaltaciones, y élites por igual. Sus obras fueron tales que los que estaban cerca de Él no podían negar los hechos. Él dio la bienvenida libremente al examen de sus milagros. El apóstol Pedro recuenta, “Cuando les dimos a conocer la venida de nuestro Señor Jesucristo en todo su poder, no estábamos siguiendo sutiles cuentos supersticiosos, sino dando testimonio de su grandeza, que vimos con nuestros propios ojos.” (2 Pedro 1:16). Antes de que Jesús ascendiera al cielo, el envió a Sus seguidores con este mandato de milagros, “Ciertamente les aseguro que el que cree en mí las obras que yo hago también él las hará, y aun las hará mayores, porque yo vuelvo al Padre.” (Juan 14:12). Una vida que ministra lo milagrosos comienza con una santa insatisfacción con la forma en que las cosas están. Jesús vino a la tierra para cambiar las cosas por toda la eternidad. Los apóstoles entendieron que eran agentes de cambio. Debían llevar su mensaje de salvación y milagros a las naciones. Pasaron el resto de sus vidas llevando ese mensaje a un mundo perdido y moribundo. Dios desea intervenir milagrosamente en los corazones y las vidas de toda la humanidad. ¡Nos ha llamado a continuar con este legado lleno de milagros que se extiende por todo el Antiguo y Nuevo Testamento hasta hoy! ¿Estamos dispuestos? Mientras tanto, el mundo quiere ver los hechos, las "obras mayores". Esto solo sucederá cuando suficientes creyentes experimenten una santa insatisfacción con la forma en que están las cosas, un descontento inspirado por el Espíritu, un deseo de la intervención de Dios en todo lo que hacemos. Hoy siento que Dios me está diciendo…

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LA PRUEBA DE ELÍAS Elías se presentó ante el pueblo y dijo: — ¿Hasta cuándo van a seguir indecisos? Si el Dios verdadero es el Señor, deben seguirlo; pero, si es Baal, síganlo a él. El pueblo no dijo una sola palabra. 1 Reyes 18:21

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Una de las mejores historias en el Antiguo Testamento sobre la intervención de Dios tuvo lugar en el Monte Carmelo cuando Elías abiertamente desafío a 450 profetas de Baal que adoraban ídolos. Lo hizo cuando preguntó: "¿Cuál es el Dios verdadero?" Esta no era una prueba para los tímidos. Elías quería que la gente viera una demostración concreta y única de la intervención y el poder de Dios. Rápidamente, cada lado acordó hacer un altar de madera y piedras con la carne de un buey colocado sobre él. Los adoradores de Baal prepararon el becerro, lo colocaron en el altar, invocaron el nombre de Baal desde la mañana hasta el mediodía. Incluso saltaron alrededor del altar, se cortaron con cuchillos y lloraron en voz alta al cielo. No hubo ninguna respuesta. Luego llegó el turno de prueba de Elías. Preparó un altar con doce piedras, una para cada una de las tribus de Israel. Después de que la madera y la carne estuvieron en su lugar, pidió que se vertieran cuatro barriles de agua sobre el sacrificio para demostrar el poder del Todopoderoso. Entonces Elías les dijo a los ayudantes que empaparan el sacrificio por segunda y tercera vez con cuatro barriles más de agua cada vez. Había tanta agua que corría alrededor del altar y llenaba la zanja que la rodeaba. Elías alzo su mirada al cielo y ofreció una de las oraciones más poderosas que jamás se haya registrado: “Señor, Dios de Abraham, de Isaac y de Israel, que todos sepan hoy que tú eres Dios en Israel, y que yo soy tu siervo y he hecho todo esto en obediencia a tu palabra. ¡Respóndeme, Señor, respóndeme, para que esta gente reconozca que tú, Señor, eres Dios, ¡y que estás convirtiéndoles el corazón a ti!” (1 Reyes 18:38-39) El siervo de Dios tenía una petición específica y Dios le dio una respuesta específica: En ese momento cayó el fuego del Señor y quemó el holocausto, la leña, las piedras y el suelo, y hasta lamió el agua de la zanja. Cuando vieron esto, todos se postraron y exclamaron: “!El Señor es Dios! ¡El Señor es Dios!” Elías fue llamado a una vida de sagrada insatisfacción con el culto a los ídolos que se extendía por toda la tierra. Hoy, una estatua cerca del monte Carmelo en Israel, conmemora la intervención victoriosa y divina sobre los falsos profetas, y el relato del Antiguo Testamento ha llenado de valentía, por siglos, a creyentes para que se conviertan en valientes agentes del Reino. Hoy siento que Dios me está diciendo… ________________________________________________ ________________________________________________ ________________________________________________ ________________________________________________ ________________________________________________

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________________________________________________ Mi respuesta es… ________________________________________________ ________________________________________________ ________________________________________________ ________________________________________________ ________________________________________________ ________________________________________________ Mi oración para hoy es… ________________________________________________ ________________________________________________ ________________________________________________ ________________________________________________ DÍA VEINTICUATRO

LA UNCIÓN DE DOBLE PORCIÓN DE ELÍAS Al cruzar, Elías le preguntó a Eliseo: —¿Qué quieres que haga por ti antes de que me separen de tu lado? —Te pido que sea yo el heredero de tu espíritu por partida doble — respondió Eliseo. —Has pedido algo difícil —le dijo Elías—, pero si logras verme cuando me separen de tu lado, te será concedido; de lo contrario, no. 2 Reyes 2:9-10 Desde el momento alrededor del año 856 AC cuando Elías vio a Eliseo arando el campo con muchos bueyes, todos los 120 pies de bestias tirando del arado, sucedió algo que afectaría a las generaciones venideras. La unción sobre Elías fue tan poderosa que Eliseo inmediatamente sacrificó a sus bueyes en el lugar, celebró una barbacoa masiva para los que lo rodeaban, luego siguió al profeta y se convirtió en su sirviente (1 Reyes 19), de la misma manera que Josué ayudó a Moisés.

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Escuchamos muy poco acerca de Eliseo durante el resto de los años de ministerio de Elías hasta el momento en que se hizo evidente que el Señor iba a llevar a Elías en un torbellino (2 Reyes 2). Después de la solicitud de doble porción de Eliseo, Elías probó el compromiso de su siervo al pedirle que se quedara tres veces mientras iba a Betel (2 Reyes 2: 2), a Jericó (2: 4) y luego al Jordán (2: 6). Eliseo se negó a dejar a su maestro. ¿Por qué? No quería separarse de la unción prometida. Así como cuando lo llamaron del campo de bueyes, Eliseo sabía que no había unción sin acción y obediencia. Siguió moviéndose, cerca del profeta, y de repente apareció un carro de fuego y Elías subió al cielo en un torbellino (versículo 11). Mientras que el manto de Elías caía, Eliseo corrió a cogerlo y así también obtuvo la unción prometida: “Luego recogió el manto que se le había caído a Elías y, regresando a la orilla del Jordán, golpeó el agua con el manto y exclamó: “ ¿Dónde está el Señor, el Dios de Elías?» En cuanto golpeó el agua, el río se partió en dos, y Eliseo cruzó. Los profetas de Jericó, al verlo, exclamaron: « ¡El espíritu de Elías se ha posado sobre Eliseo!» Entonces fueron a su encuentro y se postraron ante él, rostro en tierra.” (2 Reyes 2:13-15). Dios planifica los momentos en que estamos cerca de la unción, pero si dudamos o nos detenemos, su toque nos pasará de largo. Elías tenía una santa insatisfacción con la forma en que estaban las cosas y se negó a aceptar nada, a menos que fuera la unción de doble porción. Mucha gente quiere recibir grandes cosas de Dios. Pocos, sin embargo, están dispuestos a pagar el precio. Hoy, debemos activar nuestra fe y prepararnos para recibir lo que Dios nos tiene reservado. Que el clamor de los corazones de los creyentes sea: "Señor, tengo hambre de una doble porción. ¡Deja que tu manto caiga sobre mí!" Hoy siento que Dios me está diciendo… ________________________________________________ ________________________________________________ ________________________________________________ ________________________________________________ ________________________________________________ ________________________________________________ Mi respuesta es… ________________________________________________ ________________________________________________ ________________________________________________

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________________________________________________ ________________________________________________ ________________________________________________ Mi oración para hoy es… ________________________________________________ ________________________________________________ ________________________________________________ ________________________________________________ DÍA VEINTICINCO

CINCO PANES Y DOS PECES Jesús tomó los cinco panes y los dos pescados y, mirando al cielo, los bendijo. Luego partió los panes y se los dio a los discípulos para que se los repartieran a la gente. También repartió los dos pescados entre todos. Comieron todos hasta quedar satisfechos, y los discípulos recogieron doce canastas llenas de pedazos de pan y de pescado. Los que comieron fueron cinco mil. Marcos 6:41-44 En dos ocasiones diferentes, así como se registra en el Nuevo Testamento, Jesús tomó una pequeña cantidad de comida, la multiplicó milagrosamente y alimentó a una gran multitud. En el caso registrado en Marcos 6, así como en Mateo 14, Lucas 9 y Juan 6, (el único milagro que tuvo tal honor para ser mencionado en los cuatro Evangelios). Estos hechos son conocidos: Jesús enseñó a una multitud de 5000 hombres, más mujeres y niños. Era un área remota, un lugar desierto cerca de Betsaida, y cuando se hizo tarde, los discípulos sugirieron que se despidiera a la gente para que comprara algo de comer. Jesús respondió: "Tú dales algo de comer" (versículo 37). Se destacan varios puntos que deberían ayudarnos a vernos más claramente hoy: • Tenemos la tendencia de aplazar lo que debemos hacer (versículo 35), pasar la pelota (versículo 36) y preocuparnos (37) cuando en realidad desesperadamente necesitamos un milagro. ¡Existe una manera mejor! • Prepararse para un milagro requiere una sincera evaluación de la situación presente (versículo 38). Las personas tenían hambre. Era tarde. Con tal vez unas 15,000 o más personas (contando a mujeres y niños), la situación rápidamente se hacía más desesperante. Dios siempre comienza con lo que tenemos y en donde estamos.

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• Así como cuando el niño ofreció sus cinco panes y dos peces, nosotros también debemos voluntariamente darle a Dios todo lo que tenemos (versículo 38). • Nosotros podemos esperar que Dios haga milagros (versículo 42). ¡Así es como Él lo hace! El desea derramar sus milagros y su multiplicación sobre Sus hijos. San Agustín dijo: “Los milagros no son contrarios a la naturaleza, solo son contrarios a lo que nosotros sabemos de la naturaleza.” Sea honesto con Dios acerca de su necesidad. Busque una insatisfacción santa sobre cómo están las cosas hoy. Prepárese para los milagros. Tenga una expectativa de la intervención de Dios. Hoy siento que Dios me está diciendo… ________________________________________________ ________________________________________________ ________________________________________________ ________________________________________________ ________________________________________________ ________________________________________________ Mi respuesta es… ________________________________________________ ________________________________________________ ________________________________________________ ________________________________________________ ________________________________________________ ________________________________________________ Mi oración para hoy es… ________________________________________________ ________________________________________________ ________________________________________________

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________________________________________________ DÍA VEINTISÉIS

EL CAMINO A DAMASCO Mientras tanto, Saulo, respirando aún amenazas de muerte contra los discípulos del Señor, se presentó al sumo sacerdote y le pidió cartas de extradición para las sinagogas de Damasco. Tenía la intención de encontrar y llevarse presos a Jerusalén a todos los que pertenecieran al Camino, fueran hombres o mujeres. En el viaje sucedió que, al acercarse a Damasco, una luz del cielo relampagueó de repente a su alrededor. Él cayó al suelo y oyó una voz que le decía: —Saulo, Saulo, ¿por qué me persigues? —¿Quién eres, Señor? —preguntó. —Yo soy Jesús, a quien tú persigues —le contestó la voz—. Levántate y entra en la ciudad, que allí se te dirá lo que tienes que hacer. Hechos 9:1-6 Saulo de Tarso tenía una agenda clara. Había recibido autoridad del sumo sacerdote (probablemente Caifás) para representar al Sanedrín en la persecución de cristianos en toda la región. Ese era su propósito al viajar a Damasco. ¡Entonces Dios intervino! Dios cambió todo en un instante. Ten en cuenta que Saulo, que pronto se llamaría Pablo, no debatió el dogma teológico ni siquiera la importancia de lo que sucedió. Él simplemente preguntó: "¿Quién eres, Señor?" La respuesta, "Yo soy Jesús", fue suficiente para impactar al mundo por toda la eternidad. Saulo no lo sabía, por supuesto. Le dijeron que esperara por más instrucciones. No sabía que estaba haciendo una transición del liderazgo en la sociedad judía al ser utilizado para poner el mundo al revés con el Evangelio. No sabía que el Espíritu Santo lo usaría para escribir más de la mitad del Nuevo Testamento. Todo lo que sabía era que estaba renunciando a todo lo que había logrado anteriormente, y lo hizo sin discutir. Todo cambió en el camino a Damasco. Saulo pasó de ser el perseguidor a convertirse en un recipiente elegido de la intervención de Dios para el mundo, porque cuando el Señor le dijo a Ananías que ministrara al cegado Saulo, “¡Ve! —insistió el Señor—, porque ese hombre es mi instrumento escogido para dar a conocer mi nombre tanto a las naciones y a sus reyes como al pueblo de Israel.” (Hechos 9:15). Aunque no estemos en el camino hacia Damasco en el día de hoy, a donde quiera que vayamos, tenemos planes y agendas que abrumen nuestras vidas. Hemos sido llamados hacia un camino más importante, porque Daniel 11:32 declara, “pero el pueblo que conoce a su Dios se esforzará y actuará.” (RVA). ¡Desechen sus agendas por la intervención divina de Dios! Hoy siento que Dios me está diciendo… ________________________________________________

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________________________________________________ ________________________________________________ ________________________________________________ ________________________________________________ ________________________________________________ Mi respuesta es… ________________________________________________ ________________________________________________ ________________________________________________ ________________________________________________ ________________________________________________ ________________________________________________ Mi oración para hoy es… ________________________________________________ ________________________________________________ ________________________________________________ ________________________________________________ DÍA VEINTISIETE LA INTERVENCIÓN DE DIOS EN SU FAMILIA “…contenderé con los que contiendan contigo, y yo mismo salvaré a tus hijos. (Isaías 49:25) Dios ha prometido que peleará por ti y por tu familia. Él salvará a tus hijos. El principio de la salvación para tu hogar está claramente establecido en la Biblia:

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Dios estableció a la familia desde el principio, así como fue expresado en Génesis 1:27-28: Y Dios creó al ser humano a su imagen; lo creó a imagen de Dios. Hombre y mujer los creó, y los bendijo con estas palabras: “Sean fructíferos y multiplíquense…” Génesis 7:1 declara, “El Señor le dijo a Noé: «Entra en el arca con toda tu familia, porque tú eres el único hombre justo que he encontrado en esta generación.” La familia entera de Noé fue salvada del diluvio. Ese principio esta rotundamente claro en Éxodo 12 en el recuento del primera Pascua: “…todos ustedes tomarán un cordero por familia, uno por cada casa.” (Verso 3). No era un cordero para cada persona. El derramamiento de sangre seria para cubrir a cada persona dentro del hogar. Luego en Josué 24:15 leemos: “Pero, si a ustedes les parece mal servir al Señor, elijan ustedes mismos a quiénes van a servir: a los dioses que sirvieron sus antepasados al otro lado del río Éufrates, o a los dioses de los amorreos, en cuya tierra ustedes ahora habitan. Por mi parte, mi familia y yo serviremos al Señor.” En el Nuevo Testamento, Hechos 16:14-15 se comparte la historia de Lidia, una nueva creyente en Jesús: el Señor le abrió el corazón para que respondiera al mensaje de Pablo. Cuando fue bautizada con su familia. Registrado más tarde en el mismo capítulo, está el carcelero de Filipo, quien no sólo era un nuevo creyente, pero que también fue testigo del milagro de la salvación de toda su casa. Debido a los principios dados a lo largo de las Escrituras, tienes el derecho legal de reclamar a cada miembro de tu familia para Cristo. La promesa es tuya. Por supuesto, cada persona en tu familia tiene libre elección. En última instancia, cada uno es responsable ante Dios por la decisión de aceptar o rechazar su sencillo plan de salvación, pero podemos interceder para que Dios atraiga a tus seres queridos a sí mismo. Dios ama a nuestra familia aún más que nosotros, tanto que envió a su Hijo a morir por ellos. Él quiere salvar ese hogar y llevarlos a una nueva dimensión de relación con Él. Hoy siento que Dios me está diciendo… ________________________________________________ ________________________________________________ ________________________________________________ ________________________________________________ ________________________________________________ ________________________________________________ Mi respuesta es…

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NUESTRO RETO “también ustedes son como piedras vivas, con las cuales se está edificando una casa espiritual. De este modo llegan a ser un sacerdocio santo, para ofrecer sacrificios espirituales que Dios acepta por medio de Jesucristo. 1 Pedro 2:5 Estamos llamados a una vida de milagros, y el milagro más grande de todos es la salvación. El mayor llamado, como resultado, es nuestra comisión como "piedras vivas". "Piedras vivas", ¿qué significa esa frase? Dios ha llamado a los creyentes a una vida de insatisfacción santa con un mundo perdido y moribundo. “Las Piedras Vivas”, son llamadas a tocar nuestra generación de una manera poderosa y dinámica, ganando a multitudes de almas. Se nos ha dado una directiva divina y el privilegio de llevar el mensaje del poder sanador y salvador de Dios hasta los confines de la tierra. A lo largo de los siglos desde que Jesucristo dio la Gran Comisión, cada creyente ha recibido un mandato divino del cielo para compartir el Evangelio: “Vayan por todo el mundo y anuncien las buenas nuevas a toda criatura.” (Marcos 16:15) Ese llamado se demostró en la vida de los

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discípulos que se transformaron en testigos audaces y dinámicos de Cristo. El mundo fue cambiado para siempre. El fallecido J. Hudson Taylor, un dinámico misionero inglés en China durante la década de 1800, dijo: "La Gran Comisión no es una opción a considerar; es una orden para obedecer". Su vida como "piedra viva" fue un ejemplo poderoso. En su muerte en 1905, la Misión Interior de China que dirigía incluía 205 estaciones de misiones con más de 800 misioneros y 125,000 cristianos chinos. Nunca debemos contentarnos y complacernos con las victorias de ayer, porque el futuro está lleno de nuevas e increíbles oportunidades para proclamar el Evangelio. ¡Los mejores días están por venir! Hay millones de almas esperando escuchar el Evangelio, y no debemos distraernos ni retrasarnos para hacer lo que Dios nos ha llamado a hacer juntos. Lo mejor de todo, es que nosotros tenemos la mejor recompensa esperándonos, porque en ese gran día nosotros que somos “piedras vivas” tendremos la bendita esperanza de pararnos en frente de la Gran Piedra Angular para escuchar, “¡Hiciste bien, siervo bueno y fiel! En lo poco has sido fiel; te pondré a cargo de mucho más. ¡Ven a compartir la felicidad de tu Señor!” (Mateo 25:21) Hoy siento que Dios me está diciendo… ________________________________________________ ________________________________________________ ________________________________________________ ________________________________________________ ________________________________________________ ________________________________________________ Mi respuesta es… ________________________________________________ ________________________________________________ ________________________________________________ ________________________________________________ ________________________________________________

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________________________________________________ Mi oración para hoy es… ________________________________________________ ________________________________________________ ________________________________________________ ________________________________________________ NOTAS ___________________________________________________________________ ___________________________________________________________________ ___________________________________________________________________ ___________________________________________________________________ ___________________________________________________________________ ___________________________________________________________________ ___________________________________________________________________ ___________________________________________________________________ ___________________________________________________________________ ___________________________________________________________________ ___________________________________________________________________ ___________________________________________________________________ ___________________________________________________________________ ___________________________________________________________________

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