Elard Koch – Síntesis

La legalización del aborto no es un medio idóneo para disminuir la mortalidad materna

Lo muestra la experiencia de Chile, que en 1989 prohibió todo tipo de abortos y desde entonces

tanto el aborto clandestino como la mortalidad materna han disminuido.

El factor determinante para esa reducción fue el incremento en la educación de la mujer.

La legalización del aborto no es un medio útil. Chile es el país con mortalidad materna más baja

de Latinoamérica y lo tiene prohibido en todos los casos.

El aborto no es la principal causa de mortalidad materna

Las cifras oficiales del Ministerio de Salud para el año 2009 muestran que de las muertes

maternas sólo el 21% es por aborto, y sin contar que dentro de ese porcentaje no indica si se trata

de abortos inducidos o de otros tipos de aborto, como el de embarazo ectópico. El resto de las

muertes maternas (79%) son por otras causas.

El número de abortos inducidos por año en Argentina calculado por la HRW (460.000) es falso.

El número presentado por HRW no tiene sustento científico, ya que se calcula con marcado

acento subjetivo. La agencia que se ocupa de ello toma el número de egresos hospitalarios por

aborto (único dato objetivo), consulta a informantes que “digan” qué porcentaje de los abortos

clandestinos no suele requerir internación, llegando así al factor multiplicador “7”, asumiendo (sin

sustento objetivo) que por cada mujer que llega al hospital por complicaciones por un aborto hay 7

que lo hicieron sin necesitar del hospital.

Koch y su equipo, mediante el Modelo de Embarazos Esperados (que toma la tasa de fecundidad,

la población femenina en edad fértil y otros factores objetivos), hace el cálculo, llegando a la cifra

de entre 47.636 y 68.978 abortos inducidos por año en Argentina (9,8 veces menos que lo que dice

HRW).

La legalización del aborto incrementaría sustancialmente la cantidad de abortos provocados.

Mediante las cifras y experiencias de los países europeos en donde se ha legalizado el aborto, se

comprueba que el factor determinante de la tasa de abortos (es decir, la propensión de las mujeres

de un país a abortar) es la cantidad de tiempo que el país tiene legalizado el aborto. Así, los países

donde más proporción de embarazos terminan en aborto son aquellos que llevan más tiempo

legalizado el aborto. Y esto trasciende a realidades culturales o económicas.

La legalización del aborto puede traer consecuencias negativas para la salud materna y neonatal,

en especial en los países con elevada mortalidad materna.

Porque el costo sanitario y el desvío de recursos que el aborto libre y gratuito implica, trae como

consecuencia la reducción de los recursos para atender otras prioridades sanitarias como la atención

prenatal y obstétrica.

Porque aumentan otros problemas sanitarios: los nacimientos pretérmino, los recién nacidos de

bajo peso, la mortalidad neonatal, el cáncer de mama y los conflictos afectivos (depresión, trastornos

de pareja, suicidios).