sinfonía de la greda · 2019. 9. 10. · herbecía de cristales, de tenacidad quebradiza. yazgo...

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Sinfonía de la greda Dreamss

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  • Sinfonía de la gredaDreamss

  • Antología de Dreamss

    Dedicatoria

    Aun a nadie

    Página 2/96

  • Antología de Dreamss

    Agradecimiento

    A dios

    Página 3/96

  • Antología de Dreamss

    Sobre el autor

    Quiero ser el más amado

    Página 4/96

  • Antología de Dreamss

    índice

    Otra vez

    Oración

    Déjame entrar

    Lecturas

    Con odio

    Nocturno... en lo profundo del sur

    Sinfonía de la greda

    Sueños

    Si escribo

    A mi espalda te sientas

    Frente al espejo

    Sonrisa

    Gato

    Soledad

    La noche

    Reino

    Asteroide

    Niño azul

    Ella y yo

    Cerdos (amados)

    Charcos (y poco de violencia)

    Quedó ella sola

    Barro

    Página 5/96

  • Antología de Dreamss

    Siempre tú

    La palabra

    El horizonte de tus ojos

    La iglesia

    Una pluma cae del cielo

    Niña

    Caído

    Poema vedado

    Invisible

    Lágrima de barro

    Que sonría

    Nadie más que tú

    Del amor y otras palabras

    Distante

    Se cierra una puerta

    Musa

    Otra figura

    Presente

    Gymnopédie

    Pequeña

    Mujer aurora

    Haikú libre

    El amigo que dejé

    Página 6/96

  • Antología de Dreamss

    Otra vez

    No quiero que a mi niña

    la tomen entre brazos

    -Distante compañía-

    No quiero que a mi paloma

    la alimente cualquiera

    -Sonrisa y congoja-

    Desnudaré siempre la desesperación.

    ¡Y que esta sangre me deje!

    Soy estepa fría:

    Herbecía de cristales,

    de tenacidad quebradiza.

    Yazgo muerto en lo previsible.

    No quiero que el vibrato de tus labios

    hagan marchas de palomas a cavernas de murciélagos,

    acelere, resuene y palpite en otro corazón.

    Acaso cuando la lluvia llegue a estas vertientes

    que nacen en la hondonada de un débil corazón,

    sólo haya un mirar de tizones encendidos

    y una garganta apuñalada y anudada en desamor.

    Déjenme llorar...

    Sólo era otra loca... ¡si!, eso era.

    Desnudaré siempre la desesperación.

    ¡Y que esta dualidad me deje!

    Soy la dimensión abstracta de una sonrisa,

    un coho en desidia monocromática en alcohol,

    Página 7/96

  • Antología de Dreamss

    de tenacidad quebradiza.

    Yazgo muerto en lo previsible.

    El verso en mi hoja esta muerto,

    un escrito maldito.

    Aun hay páginas en blanco.

    Y es así,

    es que en esta acera camina cualquiera;

    a los surcos los ríos,

    a los ríos la mejilla.

    Este desamor no lo haces tú,

    lo justifico entre manos insolentes,

    sobre una inútil lengua acerada

    Quita de mí, paloma parda

    lo que sostengo;

    qué por ti vivo,

    qué por ti muero.

    Mas aquí

    vuelvo al fulgor.

    Eres tú

    en otra página

    que por siempre guardaré.

    Página 8/96

  • Antología de Dreamss

    Oración

    ¿Será tan fácil la entrada?

    seguramente pagaré un cuadrante.

    Tú conoces mis secretos

    y mis deseos no te son ocultos.

    He aquí que mis días,

    mis insaciables días

    ignoran las tardes soleadas;

    instantes de latidos llantos

    en donde los ríos siguen creciendo,

    en aquellos son vagos, invariables,

    pero siguen creciendo.

    Y el eterno otoño del sur

    que hace llorar mis bosques

    llenando mis pies de despojos

    como si eso diminuto de mí

    no fuera nada más

    que una tierra enriquecida en soledades,

    que a la larga son mis pequeñas virtudes:

    el silencio, la tregua,

    un sendero lleno de piedras,

    piedras tan parecidas en sí mismas;

    Servía como puente,

    como estera de pelaje quebradizo,

    como las mismas piedras,

    las mismas que pateo a diario

    al terminar las horas extras.

    Vicisitudes de un hombre deseoso por sus alas.

    Cuantos años me quedan...

    ¡Dichosos los llenos de edad!

    Página 9/96

  • Antología de Dreamss

    que menguan en la multitud

    y se eclipsan en las miradas indiscretas.

    A mi espalda,

    crecen los ríos,

    crecen las cuerdas,

    crecen las raíces.

    Pero nada es igual dentro de este corazón

    sino esta tibia sangre

    que desespera por un escape.

    No es que el fruto que me ciñe me fatigue,

    sino la certeza de su mal sabor.

    La noche llega,

    acérrimo como el viento,

    cargada de impotencia y de dolor.

    Nunca fui lo que quise,

    ni tampoco lo que esperabas de mí.

    No soy un ''si''

    No soy un ''no''

    Tú lo sabes, me conoces.

    Podría ser ese monte vomitado,

    de palabras tímidas,

    de lenguaje opaco,

    de gestos inherentes.

    Y me reitero:

    Esas son mis pequeñas virtudes,

    sabiendo que me has dicho

    que los primeros serán postreros

    y los postreros primeros.

    Esta noche miro las estrellas

    y me pregunto

    si yo también podría ser lo diminuto del cielo.

    Tú lo sabes, me conoces,

    en el fondo de esas luces

    está mi forma deseada.

    Página 10/96

  • Antología de Dreamss

    Página 11/96

  • Antología de Dreamss

    Déjame entrar

    Inicio en escribirte

    el antiguo ritual

    suspendido en la contemplación

    buscando tu rastro.

    Te paseas en los elementos,

    objetos olvidados,

    vértices y bordes verbales,

    turbal de imágenes,

    inocentes.

    Una sensación arrinconada en el pecho.

    Un deseo que empuja la lanza.

    Y de deseos.

    Qué crees que es esto

    que cruza paisajes heridos,

    de cerrada hipótesis,

    de maquillaje antiguo.

    Lo debes reconocer,

    ya lo habrías visto antes.

    No sé si tú:

    carne o ligamen,

    vino o cenizas.

    Las cosas me invaden y me alejan

    a una dimensión de lo parcial,

    latitud de congoja y sonrisa

    tan vacías como este pecho proyector,

    y la bobina que hace alarde de su virtud.

    Todo es basura.

    Página 12/96

  • Antología de Dreamss

    ¿Oscuridad?

    Y yo pido piedad.

    Y que hay de esto,

    esta mirada artificial,

    luz en resortes inicuo.

    Demoran el amor.

    Pereza entre humo de cigarrillo,

    no hay afán en lo vivido,

    y el espíritu tropieza

    en tu alma belleza.

    En la fotografía:

    textura, espejo, silencio,

    Incidencia.

    Hipnótico fundamento

    de colores zurcidos.

    de horizonte violento.

    Despreciada y desechada

    y como que escondes la mirada.

    Palpo, en inconsciencia

    la artificial llama,

    impreso primitivo,

    rozar un nirvana.

    Pero tenías razón,

    en qué quedo el pacto,

    las cosas me hablan,

    los muebles se mueven.

    Y no es psicosis

    ni tampoco esquizofrenia

    es el vibrato

    de esta tinta fosilizada.

    ¡Aprieta nudo, aprieta!.

    Llorar es,

    Página 13/96

  • Antología de Dreamss

    entonces

    estalla el universo

    y entonces,

    existes,

    existes en todas las palabras.

    Y he aquí el espejo...

    Fotografía fósil,

    solsticio de invierno

    rozar las espinas

    moler el silencio.

    soy mal fario.

    Página 14/96

  • Antología de Dreamss

    Lecturas

    En pulsar de velos:

    Mis párpados.

    Luz que desdeña realismo

    y degrada lo onírico.

    Me acompañan paréntesis

    la poesía,

    como una taza de té caliente.

    Y la etiqueta

    que me cuelga

    -Pero no como vergüenza-

    en mi envoltura somática de psique.

    E irrumpo en la bienaventuranza;

    exhortar mutuo

    de un objeto rustico o contemporáneo.

    Sin bordes me rodea el alma,

    sin manos me escarba la pupila.

    Y entre jaspe y cornalina,

    arrecife extra-celeste de dilemas

    que simplifico burdo:

    (Lo mío suele ser basura).

    Por las noches

    mis vocales enloquecen

    y subyace un niño de agua

    refrescando un animal fiero.

    Dedos que pastorean tiernos

    el palpar húmedo y etéreo de la hoja.

    Formulismo idóneo y cromado.

    -Únicamente me es como un beso-.

    ¡Ay de ti soledad!

    Página 15/96

  • Antología de Dreamss

    ¡Qué te jactes otro día!

    Entre hoja y hoja.

    El zarpazo a la vida.

    El amor de mis amores.

    Voluntad infantil que me cuida.

    Hoy he sumado otro libro a mis días.

    Página 16/96

  • Antología de Dreamss

    Con odio

    Cultivo hasta este momento

    tu presencia.

    He aquí hay paz,

    amor que intentas,

    amor que al canto

    dulcifica tu encanto

    y el poema se enraíza.

    Hay murciélagos en vocales,

    libertad indescifrable.

    Se habla de crisis

    propensión al llanto.

    La gente no entiende;

    hablas con los artefactos.

    Hay latidos, lápiz cruzando.

    El suspiro te depura.

    El otoño tiene hocico silvestre.

    Sales de tu pecho; entras

    vuelves solitaria

    he aquí de tu mano la sombra

    extensión tuya, únicamente tuya.

    Domesticas los solsticios;

    te enamoras

    y la luz queda a estrado de tus pies.

    (El mundo se mueve)

    Es tan horrible el mundo

    no lo quiero para ti.

    En tus ojos

    el humedal subterráneo.

    Constelación de cinerarias,

    siempre virginales,

    Página 17/96

  • Antología de Dreamss

    salen de tu boca;

    emblema de un licor estancado,

    de ese brocal,

    de ese lindero inhalamos.

    ¿Se hará mención de tu amor?

    ¿Trascenderá tu arte?

    Amo toda la poesía,

    también amo que lo intenten.

    La estepa es fría

    y te rehúsas a crear fuego.

    No gastes tu palabra en mí

    gastala en tu pecho.

    El camino no entiende del amor...

    aun nos espera.

    Es tonto el camino.

    Es inútil la línea trazada.

    (Digámoslo así,

    creo que eso piensas de ti)

    Tu pecho se espesa,

    se refracta.

    Hay arco iris por pupilas,

    misterios celestes,

    turbal nunca basta.

    Amiga mía

    te besaría la frente

    y en verticales nieblas

    hablaría mis razones.

    Es tu cielo. Es mi cieno

    presentimiento inerte

    siempre, siempre y siempre.

    Ay niña...

    Así de precipitados

    nunca arrebataremos la plenitud,

    -musgoso ego-

    y soledades a la luz.

    Eres de la luz

    Página 18/96

  • Antología de Dreamss

    y vienes de la luz

    queriendo legar el trono de Dios

    empuñando un cetro de carne.

    Te empujas a la lanza

    y el mal fario arde,

    testimonio de agua,

    agua y sangre.

    Y se eterniza la simiente,

    horadado corazón.

    La noche se perpetua.

    Qué importaban los dientes de ajo

    la gente,

    el amor a las artes.

    Un licor insoportable fermenta en tu pecho

    y la inocencia acalambra su mistura.

    En tus ojos

    avizoro una mirada,

    la tesitura se herrumbra,

    el ligamen se pudre.

    Y en mi huerto

    la ultima flor cultivada:

    tu luz,

    tus ojos,

    tu autentico arte.

    Y sé que el amor es eternos.

    Página 19/96

  • Antología de Dreamss

    Nocturno... en lo profundo del sur

    (Huye de Edom hijo.

    Niega a Bosra.

    Hollalos en tu ira hijo, poesía.

    Sin dudar que eres real)

    ******

    Mi Quellón

    Aguacero en mi tejado, inclinado.

    Cantar contigo quiero, brisa marina

    Con tu zinc humeante, inanimado.

    La mirada llueve en los juncos

    y canta su acuarela grisáceo.

    Las tardes siempre son frías.

    Quellón es un kultrun de lata.

    Canta ciudad chilota, entona enamorada.

    Eres como el lomo de un zorro plateado

    y tu gente cómo sus flecos, amor congelado.

    ******

    La lluvia

    En el silencio de la noche

    se posa con tristeza,

    revelando su pena,

    rechazando las estrellas.

    Saber que ellas encienden

    lo que sus lágrimas nunca podrán,

    Y que su brillo es más anhelado

    Página 20/96

  • Antología de Dreamss

    que su velo oscuro y pesado.

    Cae y seguirá cayendo.

    Tempestad sureña... tempestad.

    ******

    La noche

    Acompañada de un paño negro

    que cubre los bosques.

    Sumergiéndose en un vaso oscuro;

    letargo de mistura amargada.

    Apartada con la luna compañera.

    Apacentando la fustigada simiente.

    Cómo no quererte noche mía

    si en ti mi tinta enloquece.

    Cuando el sol en su agonía pide piedad

    he aquí un horizonte sangrante, oscuridad.

    ******

    El demonio

    Con la pena de la noche condenada,

    incidencia, anatema sellada.

    Atormentada de pasión y deseo.

    Empuñando un alud de carne.

    Desenfrenada sobre muchas aguas.

    Embriagada habitando espejos.

    ¿Descender como antiguo ángel?

    ¿Besar como olvidado discípulo?

    El alfarero señorea sobre el tiesto:

    inicios; querubín; tamboriles; descienden.

    ******

    Página 21/96

  • Antología de Dreamss

    El hospital

    Cae la lluvia blanca, cae mustia.

    Cierro las cortinas. Fría el alma.

    Camilla fatiga la carne, los huesos.

    Poesía me acompaña ligera.

    Pero aquí soy otro más de blanco.

    En la inyección caigo abstracto.

    Para pasar la pena duermo.

    Para soñar escribo una oración.

    Arrincono la crisis en mi corazón.

    soy pronombre del otoño, ramaje sin sol.

    ******

    El árbol

    ¿Me recuerdas? eres

    el viejo árbol que visitábamos.

    Hoy, un cadáver podrido por dentro

    y reseco por fuera.

    Como el ser que vago en tus sueños.

    Aceptando nunca más estar en pie.

    Alojando en su interior

    insectos y gusanos.

    Sin más una hoja que entregar.

    -Corteza de pino. Soledades-

    ******

    Un sueño

    Podrá el muerto llamarme

    a voces destajo infame.

    Tocarme la vergüenza de la carne.

    Rozarme la tesitura ahí nos diga.

    Página 22/96

  • Antología de Dreamss

    Podrá decir que lo hizo a mi medida.

    Podrá decir que mi oficio no es tarde.

    Y me enhebra en los oídos su saliva:

    ''Lo hemos hecho por amor a las artes''

    Hay que escribir dice el reloj tras la vida.

    Entre la niebla una sombra vertical arde:

    Pende la poesía

    en el sur, en el frío...

    c

    o

    l

    g

    a

    n

    d

    o

    Poesía hijo, furor

    Arte.

    Página 23/96

  • Antología de Dreamss

    Sinfonía de la greda

    Tú eras el sello de la perfección,

    lleno de sabiduría,

    y acabado de hermosura.

    (EZEQUIEL 28:12)

    Sobre vuestra muerte

    cabalgando a la balanza;

    suponéis un rincón habitable,

    donde el cargamento diario,

    quebradizo, triste y vertiginoso,

    entrega su desnudez de nuez.

    Allí, distintas y plurales,

    como las piedras del río.

    Donde un hálito de azufre

    glorifica a criaturas desesperadas

    despojándose a sí mismas de la plenitud,

    de alas, de ojos, de aros, tamboriles.

    Desciendes oh protector

    sobre aquellas que penitentes

    fecundas a la adivinanza,

    matriz estéril,

    una boca que nunca dice basta.

    Sois aquel que la greda apasionó.

    Desechas tu corporeidad de cornalina

    y te aventuras a ser un espanto

    dejando de ser por siempre

    y apostándolo todo.

    ¡Oh sucia rata asquerosa!

    plagas tu mente de mutilación,

    Página 24/96

  • Antología de Dreamss

    escarbas a la luz de la luna,

    succionas la cálida médula,

    te ocultas entre las sombras de las sombras,

    silencias tu karma

    y sigues devorando.

    Entre sienes y dientes

    sabéis la lectura,

    tu locura indomable.

    Desciendes entre llamas,

    ardiendo en tu pasión,

    desenfrenado.

    Un cielo y una tierra que pasarán,

    lenguas que cesarán,

    profecías que serán selladas.

    No comprendéis el arrullo de las velas

    e ignoráis el gemido del barro.

    Ultrajáis la niñez.

    Rondáis la vejez.

    Sois ese toro

    que advertía el salmista,

    violetas de Basan.

    Cuando solitarias en el ultimo paroxismo

    desechan todo lo vivido

    ¿Hay algo añorable en el recuerdo?

    ¡Decídmelo cuando estéis muerto!

    Una luz de cobalto

    se divisa entre la niebla celeste,

    un árbol, un mar de vidrio y fuego

    ... -Los frutos invisibles-

    Eran aquellos el rincón habitable

    donde el yugo era fácil

    y ligera la carga.

    Miles de rumbos y espejos

    mas únicamente

    Página 25/96

  • Antología de Dreamss

    lo absoluto

    era el camino estrecho.

    Entonces los jueces serán juzgados

    y los alguaciles irán en cautiverio.

    Un súbito dolor depura la pupila

    y el filo de una pluma

    lo profundiza todo.

    Contigo sufriendo

    Contigo creyendo

    Contigo esperando

    y contigo soportándolo todo.

    ¡Ay desventurado!

    ¡Ay lucero!

    Qué queríais lograr con esta euforia...

    ¿Gloria?

    He aquí espada.

    Página 26/96

  • Antología de Dreamss

    Sueños

    Eran los sueños

    un lugar inhabitable

    donde oprobios semblante

    de karma salino

    iban sobre mar,

    iban cristalinos.

    Olas de empujada sombra,

    un escenario perfecto

    para descender a lo antiguo.

    Enhebrar un anatema.

    Desgarrar un paisaje.

    Degollar las intenciones.

    Era para aquellos

    la libertad de una vergüenza

    que nunca se quiso.

    Ay... soledades

    Ay... semblantes heridos.

    Nadie nos ve,

    nadie, compañero mío.

    Y ahora,

    este manantial

    que brota de lo que era

    una verdad acérrima

    y yo siempre vagando fuera

    como las fieras

    en un vaso de greda, vacío.

    Mi cielo,

    tú y yo conmovidos

    en la oscuridad,

    justificando nuestras bajezas.

    Un espejo

    Página 27/96

  • Antología de Dreamss

    en su furor encomendado,

    devastando las noches,

    ofuscando los ritos,

    todo fue de tu mano.

    Y ahora...

    ¿este manantial?

    Piedad de mi boca;

    lo antiguo.

    Despójame de un golpe

    oh padre,

    zarpazo, lanza, escupo,

    pero floto en tu arte,

    cerca de ti, ceñido.

    Decirte en lo que habitas:

    amores más que nunca,

    sueño estar contigo,

    tú y yo en la mistura,

    sabor de mi vino.

    Que ya no me eres como antes,

    no hay horizonte

    ni linderos para un poema.

    Cómo he de tocarte

    Cómo he de sentirte

    Cómo he de vivirte

    esperanza mía

    mi luz

    mi roca

    mi castillo mío

    en quien confiaré.

    Página 28/96

  • Antología de Dreamss

    Si escribo

    El cual hace mis pies como de ciervas

    Y en mis alturas me hace andar.

    (HABACUC 3:19)

    Cuando veo mis pies llegar a la cima

    lo escrito, do en mi alma resplandece.

    Tengo miedo, temo habitar encumbrado.

    Lo importante de un hallazgo o triunfo

    vuela sobre mí, y se despliega un dilema;

    si vino o cenizas, si carne o poema.

    Pero no creo que la constelación referente

    a suaves y armoniosas nebulosas, sean

    sugerente a una tierna y dulce mente, que,

    lucha cautelosa contra palabras ociosas.

    Nunca se vive dos veces el presente. Como

    he de guardarme en el vértigo del suceso.

    Atrevidamente la vida se hace presto

    a triunfos ambiguos, a vagos reflejos,

    y muy escasos momentos de paz, nos pide.

    En una añorable remontada de sentimientos

    indudable es lo llano, el horizonte de sucesos.

    Mi lucha no es contra vosotros, -carne vagante-.

    Es contra la niña que nunca se atrevió a bailar

    Es contra la mano sudorosa que nadie acarició

    Es contra la mirada que sólo divisa el suelo

    Contra el amor pavoroso que no florece en los ojos

    Contra el poeta que no destila su entendido reflejo

    Sois como yo, "miedo", con el vértigo de escribirlo.

    Página 29/96

  • Antología de Dreamss

    Y por eso escribo, para evocar lo antiguo, herido.

    Andar con mis pies de cierva; altura en la que vivo.

    Y así... tan sólo así, mi pequeña suspensión etérea

    que baja lastimosamente como una pluma refractada,

    que rebosa mi corazón incipiente y lo espesa todo.

    Decidme sureña; si escribo, si te escribo... (si te escribo)

    ... si tan sólo te escribiera.

    Página 30/96

  • Antología de Dreamss

    A mi espalda te sientas

    (Las estrellas decían:

    Míranos que somos eternas.

    Y en tus ojos, mi primer poema)

    A mi espalda te sientas,

    fría, hermosa e intocable.

    Y con tu aliento de brisa nocturna

    me envuelves bajo la luz de la luna.

    Niña de ojos negros

    ¡Inerte!

    Paseate tranquila en mis sentidos.

    Atrapas con tu canto

    hermosa nebulosa de mis sueños,

    pequeña, danzante, inocente,

    cambias en drásticos colores.

    Recuerdos de esa noche

    de espalda a espalda,

    el hilarante viento de mil ánimos

    se llevó tu canto, tus palabras

    tus preguntas obvias.

    Recuerdos de esa noche,

    que noche más bella,

    fijas tu mirada en cada estrella

    ignorando tu vida

    tus antiguos deseos

    y mis deseos que ya se añejan.

    Poco a poco se apagó la luz,

    pequeña luz metafísica

    que avivó nuestros sentidos.

    Te escondes, me ignoras,

    Página 31/96

  • Antología de Dreamss

    no te sientes presente.

    Dulces ojos decaídos,

    confundidos, tristes, indiferentes.

    Espero respuestas astrales,

    filosóficas, espirituales,

    y no te encuentro.

    Mas tú ya lo sabias

    jamás fui valiente,

    en el escenario de lo perdido

    me ahogué en el miedo.

    Y te deseo así,

    mi silencio.

    No fui capaz de protegerte,

    te dejé sola en la confusión,

    perdida, pálida, incoherente.

    No me martirizo por mis actos

    ya que en el ultimo cigarro

    todo se ha olvidado.

    Y la noche llegó a su fin

    la aurora se hizo presente

    y tras la cordillera...

    el sol te sonríe.

    Página 32/96

  • Antología de Dreamss

    Frente al espejo

    Qué se esperaría

    de esos pies viandante,

    charcos enlutados

    de bermejo acuarela.

    Luminaria la estela,

    un "te quiero" gaseoso,

    un aliento,

    bosquejo de tus pies,

    viandante.

    Tú no lo sabias

    pero, corrías y corrías

    ¿a un amor?

    pero tú no conocías.

    Observa esa vertiente

    como desciende

    virtuosamente mal definida.

    Tronchados los sueños

    en un compás lento,

    jirones de vapor

    salían de tu pecho.

    Cansancio tu tejido,

    fustigado,

    zurciendo con despecho

    el total desprecio.

    Tus ojos gemían

    la indiferencia pura,

    tu boca: certeza inmunda,

    negros fantasmas

    ardían absueltos.

    Redimirte viandante

    inmerso en un hueco.

    Página 33/96

  • Antología de Dreamss

    A poco de hurgar

    la lastimosa tierra,

    tus labios germinados,

    tormento en un contacto,

    depurado en un beso,

    un pequeño beso.

    Arden tus pies viandante

    corazón nebulizado,

    hambriento suceso.

    Seguramente tu cabello;

    fogata oceánica en su aspecto,

    el cristal empañado

    que frotabas con tus dedos,

    hay algo más que unos ojos nebulosos.

    Pies de zarza, inconsumible,

    descuajado viandante

    incontinencia pura.

    Creías que a tus pasos

    y a tu ritmo

    todo florecía,

    torpe viandante

    construyendo castillos

    con pieles ocultas,

    quebradizas, tristes

    ¡ahh viandante necio!

    Lo cierto y asertivo era

    no precipitarce

    ni sucumbir

    en aquel destiempo.

    Necio, virtual y ciego,

    irredento el paisaje,

    inanimado suceso.

    travestido emplumado.

    máscara de agua que.

    insosteniblemente en su fachada

    ni tu madre idolatrada

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  • Antología de Dreamss

    te libraría.

    Sin tus garras.

    Sin tu quijada.

    Inerme,

    serás por siempre

    sutil y lastimosamente

    un suspiro,

    un aliento,

    vapor,

    un niño de agua.

    Página 35/96

  • Antología de Dreamss

    Sonrisa

    Era un papel desnudo en la oscuridad,

    de pronto; una sonrisa; no había tinta

    pero en mi corazón, fueron todas las palabras.

    Página 36/96

  • Antología de Dreamss

    Gato

    Anoche dormí en llamas; ya no me habla.

    A la mañana el dolor desplegó sus alas; se fue.

    Hoy sostengo un gato durmiendo entre mis brazos

    ¿Qué más puedo desear?

    Página 37/96

  • Antología de Dreamss

    Soledad

    ¿Crees? Yo creo, cuando estoy en silencio

    Y la quietud me enlaza al universo, ''unión''

    La palabra ''Dios'' comienza a tomar significado

    Cuando una parte de mí añora la soledad.

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  • Antología de Dreamss

    La noche

    No puedo cerrar los ojos

    Ahora sueño la realidad.

    Camino con lo profundo

    entre frías palabras.

    El futuro lo entiendo,

    pero mis sueños endebles

    salen a abrirle el paso

    a pasillos de percepciones,

    desiertas,

    como el hueco del corazón.

    Y sólo una vela,

    una lengua de fuego

    que ilumina lo realizable

    derrama sombras

    por las paredes,

    paredes que soy.

    -oscura poción-.

    Nadie

    pone vinos nuevos

    en esta copa

    rebosante del mundo.

    Te pido verbo

    desadormece el silencio

    y que nadie se atreva

    con la verdad acérrima

    que busca de mí.

    Miraba las calles.

    los artefactos,

    las puertas que tiemblan

    en sus irreales quicios.

    -Podrán tocar de mí-.

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  • Antología de Dreamss

    El viento sopla

    de aquí para allá

    y no sabes de donde viene.

    Palpa los muros,

    toca las heridas,

    irremisiblemente.

    Alguna vez

    este espacio vacío

    tocó los vendajes

    manchadas en sangre.

    Sangre propia.

    Sangre del gusto mismo.

    Y entonces

    de qué apurar soy

    con mutilarme

    lo que no puedo controlar.

    Sanguinolenta es,

    que viene de entre dormida

    a lamerme los huesos,

    como flor de soledad.

    Todos

    como viento

    encontramos las hendijas

    donde soportar el dolor.

    De aquí para allá.

    Pero el viento se equivoca.

    Dice mal su nombre.

    No sabe definirse.

    Dice mal su nombre.

    Ni ha sabido de eternidades.

    Sólo lo palpable es para él.

    Y no quisiera ser espacio,

    Así por sí,

    Innominado,

    o solitaria sombra derramada

    a luz de un pastor.

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  • Antología de Dreamss

    No puedo cerrar los ojos

    Ahora sueño la realidad.

    Y cómo arrancarme

    esta corteza de trigal.

    Acudo al silencio.

    Al fuego de una salamandra.

    Al café angustiante de la noche.

    Nadie ha llegado,

    ni llegará.

    Mientras tanto yo,

    criatura solitaria,

    me sirvo de la esperanza misma

    Con los ojos al fuego,

    y la boca en el silencio.

    Por si escribir,

    por si escribir es la hora

    frente a la luz

    frente al espejo

    frente a los ojos de Dios...

    (en mí... los ojos de Dios).

    Página 41/96

  • Antología de Dreamss

    Reino

    No dices nada cuando quiero amarte

    ¡Y cómo es que yo te quiero tanto!

    Desadormecida, abrigas mis pasiones

    Y lloras en secreto, junto al silencio

    Por yo robarte espacio de tu reino.

    Página 42/96

  • Antología de Dreamss

    Asteroide

    Vuelen por el aire gaviotas locas...

    Vuelen sin saber su rumbo.

    Jueguen por las sombras palomas locas...

    Jueguen sin saber de la gente.

    Pero tú, corazón que no asciendes

    Vuela a lo infinito

    Porque ni el rumbo ni la gente acerada

    Harán jaula al nirvana de tus alas.

    "Luces de asteroides"

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  • Antología de Dreamss

    Niño azul

    Un niño azul sin precedentes

    Con traje de sangre y ojos inermes

    Descascarando la luz del vientre

    Dientes, piel, dientes de leche

    Leche y luz, semblante azul

    Todo era una fuga; fugaz luz

    ¡Y ellos, sempiternos a destajo!

    Cantando primores

    Con aires de leche.

    ... madre.

    Existir sin memoria

    con tu etérea leche.

    ... Mi madre;

    luz de carnatura,

    amada antes que yo,

    y yo y mi alma y mi ser

    somos por ella;

    y la luz; -también había luz-

    heredó unción para mis caricias

    por ser un trapo de inmundicia.

    ¿Y el anillo de miradas?

    y sí, anillos, como el tiempo

    anillo con fin, sin compromiso,

    anillos que no retornan,

    anillos que nada significan,

    pero etéreas, así muy bellas,

    pétreas.

    ¿Cómo llorar?, ¡argumentos!

    para aquel que desechó ser querubín

    ¡Aire! Somos la tierra

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  • Antología de Dreamss

    Que cruje, que suena,

    Se tambalea y se desvela

    ¡Detente!, más leche

    De pronto, soy una voz

    Que rebosa las cubas

    Con huesos floreciente

    ¿sabes cómo se siente?

    Sostienen mi foto

    sobre la puerta

    con alfileres,

    como trofeo.

    Y el poder, poder, ¡poder!, ¿poder?

    Nada más que amar

    Y ser amado

    Madre, es "hoy"

    Pero mi "hoy" no es el mismo

    Quiero el "hoy" tuyo

    Quiero ser la mota

    El tamo que pasa.

    Actúo a tu revés

    A tu dobles, a tu devuelta

    Con esta lengua acerada

    Con estos ojos de adolescencia.

    Plomada de albañil.

    Sólo tenme presente

    Que soy algo raro que balbucea

    Pero ama

    ... Amar, ¿es acelerar?

    ¿Es palpitar?, ¿es que resuene?

    Yo no miento

    Yo no comprendo

    Y me desvelo,

    Y me desprendo

    Sólo lo descartable

    Es para mí

    Madre, observa mi ánfora

    Página 45/96

  • Antología de Dreamss

    Toca estas asas

    ardientes

    Y dime que los anillos pasarán

    Aun más rápido

    Con tu aliento... azul...

    Fijos, lentos

    Sueños, arte

    Poesía

    Ama

    Ama

    ... ámame.

    Más

    Aun más.

    Página 46/96

  • Antología de Dreamss

    Ella y yo

    Es un asco de muchacho,

    Es un asco ese encantamiento certero

    Ese hechizo de decir tu nombre una y otra vez

    De procurar mirarte en cada espejo.

    Luego, piensas el por qué su voz te hace llorar,

    Y llegas inspirado a tu choza

    por describir la luz que emana su piel

    Piensas que es como una pluma que cae del cielo

    Piensas, quizás mañana pueda ganar.

    Intentas la poesía

    Y terminas por el fusil.

    Página 47/96

  • Antología de Dreamss

    Cerdos (amados)

    No deis lo santo a los perros,

    ni echéis vuestras perlas delante de los cerdos,

    no sea que las pisoteen,

    y se vuelvan y os despedacen.

    (S. MATEO 7:6)

    Eran tus ojos la nebulosa obscura,

    estiércol humedecido sobre viejas replicas.

    Sobre tu eterna puerta

    arrojé mis más preciadas perlas...

    Y entonces el espanto moribundas olas,

    empujadas en el ímpetu escupido,

    cerdo en crisálida.

    Y mis esferas de nieve

    en la acera de mi templo,

    pisoteadas,

    pisoteadas hasta el alma.

    Ni la fantasía, ni la realidad,

    es un momento verbal,

    verbal sempiterna,

    un espacio inundado en deshielo;

    cieno de llanto y estiércol.

    Remembranza de catapultas

    victoriosas de tu prudencia.

    Arpón lleno de flores incipientes,

    eran mis ojos la nebulosa obscura,

    un día colmado de lluvias,

    Página 48/96

  • Antología de Dreamss

    eran mis ojos las vertientes,

    venias entre la gente.

    Y te escribo,

    entonces eres alguien,

    entonces alguien te intenta,

    entonces te recuerdo:

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  • Antología de Dreamss

    Charcos (y poco de violencia)

    ... Y dijo al hombre:

    He aquí que el temor del señor es la sabiduría,

    y el apartarse del mal, la inteligencia.

    (JOB 28:28)

    Mirada que es de todos

    dibujo de luna sobre mar

    Miradla, greda,

    como luz escribe sobre mar

    (hay un reflejo de la luz)

    Leedla.

    Vas por sendas que no conoció ave,

    ni buitre avizoró.

    El trastorno de tu raíz

    puede ser tu bolsillo,

    los muchos libros,

    o mal tu corazón.

    ¿Y qué tienes en tu boca?

    ese gesto afilado,

    la tibia voluntad,

    tu sarcasmo al hablar de la muerte.

    ¿Qué hay en tu boca?

    Lo poco de amor que quedó

    en tu vertiente mal definida.

    Cercanía de las cosas.

    Qué no te gusta esa alquimia del Verbo.

    Quisiera juntarlo todo

    y saber lo que he hecho,

    saber si llegue tarde,

    saber donde iré a pararme.

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  • Antología de Dreamss

    De que voluntad infantil

    (del más pequeño de la plenitud)

    renacerá mi canto.

    Sólo palabras...

    Al final de los tiempos

    cuando conozca como fui conocido,

    te veré sobre una llama de topacio.

    Diadema multiforme,

    collado coronado.

    Y a escabrosas plumas

    mi corazón será derribado.

    Mas aquí

    juntos los dos

    suplimos con paredes de carne

    la verdadera piel de crisol.

    Y te quejas que nada cambia

    contra los ojos que no parpadean.

    Sabiduría. Inteligencia;

    leves susurros de la aurora

    charcos al borde de un camino generoso

    descenso de un espíritu que busca una morada

    y vuelve atormentada,

    del uso de la greda

    a habitar entre las estrellas.

    Mientras aquí,

    ¡Oh aquilón!

    ¡Oh austro!

    todo esto

    sólo son palabras raídas por el viento.

    Palabras.

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  • Antología de Dreamss

    Página 52/96

  • Antología de Dreamss

    Quedó ella sola

    "Pronto se fue la noche

    Llegó la aurora

    Se fueron las estrellas

    Quedó ella sola"

    Si pudiese apresarla

    Quebrar su cuerpo como una seca rama

    Y de su inmensidad, degustarme un fuego

    como la fruta en el suelo, degradarme

    sobre sus labios

    como un escombro vivo

    como la tierra en el sol

    como la nube en el pájaro

    la destrucción del mundo es bella

    creo que eso sucede cuando la mujer ama

    te vierte, te abriga, te toma como la greda

    y luego

    arrastra consigo el universo.

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  • Antología de Dreamss

    Barro

    ¿Dirá el barro al que lo labra: ¿Qué haces?

    (ISAIAS 45:9)

    Y si por alas

    me das una nube grande

    para que suban conmigo

    todas las puertas que te niegan.

    Y que las diminutas luces del cielo nocturno

    que posesa en fulgor y belleza.

    Haga morada sobre la eterna greda

    que clama entre tus manos:

    -Por qué no respondes-.

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  • Antología de Dreamss

    Siempre tú

    Qué esperas que haga con estos materiales.

    Este templo filamentado,

    habitualmente efímero

    no se sustenta en miradas indiscretas,

    mas bien,

    decae en la multitud,

    en el fundamento de los colores,

    no da paso a zurcir palabras.

    Cae en tentaciones

    que suplican no salir

    acaso mis callen aniebladas

    bastarán para no hacerme falta;

    tu aliento frio,

    tu pupila punzante obscura,

    tu alud asertiva de decirme pálidamente: no.

    Ese soy yo...

    Y si mi alma se paralizaba

    era por la hermosa realidad que solía aparecer.

    En qué he caído;

    sales de mi interior,

    te enfrías en mis manos

    y luego de comprenderte

    te alojas en mi débil corazón

    Qué esperas que haga con estos materiales

    sinceramente, casi nada.

    El blanco y negro del asfalto que transita mi camino

    invita un café en un local suburbano

    con la idea a punta de ella

    y sus ojos soñolientos

    abren arroyos en la cuenca de mis reflejos;

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  • Antología de Dreamss

    de lo que soy,

    de lo que siempre fui.

    Entonces escribiré para ti,

    tomaré parajes de libros viejos

    y le daré vida a objetos olvidados

    seré hijo de piedra,

    nieto de rocas,

    edificaré cantares de antaño,

    caminando por el pedregal de mi sustancia

    y todo será hermoso a mis ojos

    como cuando dormía pensando en ti,

    escribiendo con mis dedos en la pared

    tu trinidad de letras,

    que es tu nombre.

    Adosado a lo de siempre.

    con tu luz.

    Siempre triste.

    Siempre solo.

    Siempre tú.

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  • Antología de Dreamss

    La palabra

    (Con sarcasmo la sana envidia

    todo hecho a mi medida.

    El que sea capaz de recibirlo

    que lo reciba.)

    Muchacha.

    Muchacha morena.

    Muchacha dedos de acuarela.

    Con limpieza

    muchacha en tu ritmo,

    banalizada entre la A y la Z.

    Una palabra te oscila el alma,

    -La conceptual existencia-.

    Camino,

    caminas con ella

    dando desuso a una bienaventuranza.

    Muchacha.

    Piel morena,

    no repares en que eres morena,

    si el desierto en sequedad encantos,

    si el sol y su mirar en huertas.

    No solo la madera, morena,

    es propensión al fuego,

    pues entonces la greda tan bella

    no podría tener una definición sempiterna.

    Al vaso le rodea el silencio

    como el pan a los perros.

    E ibas dedicando tus caricias

    a una piel azulada.

    Qué importaba ese confín anegado,

    Neptuno de flores,

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  • Antología de Dreamss

    todo tan amado y bordado.

    Muchacha.

    Muchacha morena,

    herrumbrando en palabras las cadenas.

    Dando en ascuas

    muchacha mi rito,

    descifrando mis angustias y dilemas.

    Postulando a la profecía.

    Postulando a un don de lenguas.

    ¿Qué incidencia dejará tu infancia

    tu niñez y sus casas de madera,

    tus muñecas artesonada de harina,

    tu chapotear en los castillos de arena?

    Escribirás en tu cuaderno:

    ''Señor mío. Amor mío''

    como se predica en las iglesias,

    y te harás banal en tu exigencia.

    -Amar lo palpable de la greda-.

    Y en vez de poemas,

    muchacha

    un ángel

    te hará redactar proclamas.

    Palabras

    contra palabras.

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  • Antología de Dreamss

    El horizonte de tus ojos

    ¿Qué es eso dulce que destila tu pupila

    Esa filacteria marina adosada a tu nube.

    Tu nervadura de raíces sangrientas

    y esos dos bordes violeta decaídos,

    similares a dos barcos bajo la luna?

    Posesa de belleza.

    Canta marina.

    Pequeña cristalina,

    antes que avizores la exigüidad.

    Yo tengo los tuyos

    bajo un velo negro.

    ¿Y qué veo?

    Delirios domesticados,

    así como los solsticios.

    Palabras errantes.

    Locura precipitada.

    El hablar; se jacta.

    Tu mirada; es carnada,

    y tu sonrisa; un protocolo.

    Mira como la gravedad

    tira de ti y de mí.

    Irracionales en el gesto.

    Somos la especie

    que sella en un beso

    un pacto de dolor.

    ¿Y qué veo?

    Un trigal

    buscando la mala suerte.

    Esto no es sobre tus ojos,

    Página 59/96

  • Antología de Dreamss

    es sobre tu futuro

    en el catafalco de los míos.

    sólo tengo dos monedas en el bolsillo,

    y tú te divides en ceros.

    Ay niña.

    Debemos romper

    el espejo proscrito

    que no nos deja ver

    más allá de lo que somos.

    Eternidades,

    luminiscencias,

    puertas eternas.

    Esta vez,

    sólo por esta vez,

    sujetaré mis impulsos

    e inclinaré mis barcos hacia el sur

    buscando suelo.

    Soy lo viciado

    que manosea un espejismo.

    Te sueño.

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  • Antología de Dreamss

    La iglesia

    Estaba mi iglesia ahorcada,

    manoseada hasta el alma mi iglesia.

    Al uso de bocas indecisas.

    Una leyenda

    sin precedentes en la antología

    de un poemario bordado al sur del mundo.

    Una caverna de dientes afilados.

    -Pero, sorpresa sabios-

    (las niñas veían estalactitas).

    Y ahí pendía mi iglesia

    al abismo,

    de heladas sin alas al abismo.

    Y yo era la iglesia.

    Y yo era el abismo.

    Mi cielo se encontraba en el suelo

    y lo que estaba más arriba

    se disponía a mi medida.

    Un lobo embriagado

    soñando ser un diamante esmerilado.

    Todo lo podía en la vida,

    mis pasiones ardían por delante.

    Servía el banal instinto,

    banal deseo.

    Un hueco adornado de flores.

    Qué querías que lograra con esta iglesia

    Qué más,

    que congregar a los innominados.

    Esos, que pasean por parajes secos

    y vuelven a la casa adornada,

    pero la mía estaba desarmada.

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  • Antología de Dreamss

    Tal vez para cada ser acomplejado como yo

    exista una luz enamorada en alegría

    que te entregue cada día

    un morir de desesperanza,

    una salida.

    Mis lomos ardían.

    Mis vísceras colgaban.

    Era un niño de agua.

    Un alud que cruzaba paisajes heridos.

    Y entonces lo tomé con rebenque,

    en todas las extensiones del presente

    y decidí escribir poesía.

    Al uso de los malhechores del oficio

    Barreré con mis libros deshilachados

    Y en cada poesía

    Adornaré los parajes con alegría.

    Y mi alma escapará por mis ojos.

    Y con tablas de cedro reedificaré mi morada.

    Vibraré como vibra el firmamento

    y en cada corazón que se eterniza

    anunciaré los cantares del amor.

    Página 62/96

  • Antología de Dreamss

    Una pluma cae del cielo

    (La voz que sólo yo oigo, me dijo:

    ¿te consumirás también en ella?

    Y un suspiro despliega sus alas invitando a escribirle;

    sólo veo una pluma caer del cielo,

    y un mundo para ganar.)

    Una pluma cae del cielo;

    Etérea, blanca, a medida perfecta,

    con un arco iris a tus pies.

    Vas, a uso de poetas nocturnos.

    Mujer, impalpable juventud.

    Niña, más que una mirada.

    Escarbas en lo profundo

    enriqueciendo paroxismos inexplorados,

    voy tan cerca de tu paso

    con el gesto como labrado en mismidad,

    o esmerilado en algas,

    y tu mar:

    aletargado, insaciable,

    incomprendida entre los caídos,

    inició tu forma deseada.

    Preciada a la distancia,

    tan ausente,

    como bella catarsis.

    Del cielo eres y su plenitud

    Página 63/96

  • Antología de Dreamss

    y lo que siete años declaran:

    no soy un final feliz,

    ni mucho menos una pluma en suspensión.

    Tú, que degradas mi juventud

    y sucumbes ante su eje

    sin poder tocar su cielo

    ni ver su estera celeste caer.

    Tantas veces perdida por fuera,

    Tantas veces podrida por dentro,

    empujada por su gravedad.

    Y tu silencio,

    incomprendida.

    Ángel que nunca supe,

    Ángel que nunca pudimos.

    Una pluma cae del cielo.

    Etérea, blanca, a medida perfecta,

    con un arco iris a tus pies.

    Y qué diré.

    Enajenada de los sentimientos,

    desahuciada entre las estrellas,

    lentamente consumes mi vida,

    sigilosa en tu proceso,

    sin temor a la venganza,

    sin temor a lo que digan.

    Pero en serio...

    a uso de poetas nocturnos.

    Página 64/96

  • Antología de Dreamss

    Niña

    A Yennyfer

    Verte abrir los ojos,

    El azul y sol de la mañana.

    "No es fácil el amor", dije

    Las dos partes necesitan un equilibrio

    Y ese espacio que dejas tras cada palabra

    Como bailando con los objetos que olvidas.

    Una caricia entonces

    Bajar como lágrima de gozo por tu mejilla,

    Aun los días se nublan

    Pero el sol en ti sigue brillando;

    Lo veo, lo veo todo detalladamente

    Como cuando bajas la taza y sonríes.

    Créeme, que el sol brilla en todas partes

    Cuando tú eres feliz y lo fulminas todo.

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  • Antología de Dreamss

    Caído

    Que sea la luz

    El martillo llamado arte,

    Que clave sobre ti

    Un poco de su unción,

    Que en los ojos de un hombre

    Veas la grieta a un paraíso,

    Que en tanto amas la gloria

    Llanas tu boca de hambre.

    ¿Puedes verlo?

    Como se arrastra

    Como gime

    Como se flagela.

    Eso es

    (tiemblas en tu mundo de basura)

    Por un hombre,

    con su poco de arte.

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  • Antología de Dreamss

    Poema vedado

    Nunca lees tres o cuatro veces

    y este poema

    de sol por dilema,

    también será quemado.

    Envuelto en esta luz

    no puedes tocarme,

    no hay qué añorar

    ni beso que despierte

    un futuro entrelazado.

    Lluvia no queda;

    se fue.

    Nada soportó al fracaso,

    al destiempo.

    Qué fue de los gestos

    como venidos de generosa virtud,

    tres o cuatro veces los gestos

    y fue tu tempestad.

    Acérrima lluvia

    que ahoga un pasillo venidero.

    Percepción vedada

    en el que caminaba solo.

    -Te diré que hay-

    Tizones encendidos.

    Hoja por hoja las cenizas.

    Esa atracción de vino

    que redunda en lo sexual.

    ¿Amor?

    -El siempre tiene una forma

    de sobrevivir al fuego-

    Y entre la remembranza,

    recuerdos que uno quiere devorar.

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  • Antología de Dreamss

    Vuelan las hojas,

    cojean las sillas.

    Y me pregunto

    si volveré a la tentación

    cuando la mañana disponía

    de su cargamento diario

    e irracionalmente

    lo aceptaba a mi espalda...

    Fracasos.

    -Eso podría decir-

    La soledad colapsó en mí

    como una estrella

    que postulaba a la eternidad.

    Después de un tiempo

    volvieron las hojas,

    mis actos.

    Pasado que cuestiona

    en donde estoy parado.

    Ahh las heridas...

    Quisiera juntarlo todo,

    hoja por hoja las cenizas,

    y hacer un sol inmenso

    que se ensamble en mi pupila

    con todos mis poemas quemados.

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  • Antología de Dreamss

    Invisible

    Invisible

    soy invisible

    la luz atraviesa mi piel

    y tu mirada es como luz de luna,

    pero nunca tan en serio.

    Ser la luz, "poesía" dijo tu rastro.

    Encontrarás otras cosas

    muy por dentro de mí.

    Si puedes verme,

    asegúrate de que apenas lo sepa,

    mantén presionada mi sombra

    para atar (mi pecado)

    como a tu sombra

    un ahorcado suspendido de noche

    "esa es la sinfonía fósil" dijo tu rastro

    esa era.

    Invisible

    soy invisible

    me he vuelto a tu doblez

    será una noche, dos o tres (?)

    cuánto los asidos llantos

    estaré seguro de mí

    sin poder entenderte

    que por ti el cielo crece

    y revienta en pétalos y queltehues.

    Tus manos fueron río abajo

    la brisa me cantaba al oído

    y la flor palpitaba feliz

    y te vi, con faz de cornalina

    y era el silencio en tus ojos

    Página 69/96

  • Antología de Dreamss

    y era el furor en tu boca.

    Supe huir de tus venas.

    invisible

    soy invisible

    ya no me puedes ver

    y yo no he encontrado tu rastro

    sólo te recordaré

    en la última vez.

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  • Antología de Dreamss

    Lágrima de barro

    ... y untó con lodo los ojos del ciego.

    (S.JUAN 9:6)

    Cúmulo de luminarias,

    sangre desechada.

    Pared de cerrada oscuridad,

    allí yo moraba.

    Aquella sangre cifró el misterio,

    tus antorchas de fuego.

    Con deambular hambriento

    soy testigo

    que tu sangre es dulce,

    y tu saliva

    en miradas,

    dulce panal.

    Sé el porqué

    de tu lluvia en mi cama

    colmada de flores

    y sinfónica mirada.

    ¡Oh ajenjo!

    yo seré tu hiel,

    vinagre entre tus dientes.

    tu mano padre

    embarrada por las mías.

    Página 71/96

  • Antología de Dreamss

    Página 72/96

  • Antología de Dreamss

    Que sonría

    Os digo que si éstos callaran,

    las piedras clamarían.

    (S.LUCAS 19:40)

    Era una piedra acerada

    cromada en trigales.

    Avizorada panal de resina oscura,

    oscuro pétalo,

    oscura poción.

    Máscara negra de necedad;

    Hermosa virtual.

    Realidad sínica y solitaria

    Que el Verbo sometió a la alquimia.

    Quitadle la máscara miserias

    y dadle voz a esa piedra,

    que sonría.

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  • Antología de Dreamss

    Nadie más que tú

    He estado esperando

    tu llegada,

    Ven gentilmente

    hacia mí

    En esta noche

    te siento

    plenamente mía.

    Ven suavemente.

    Escarba en este corazón.

    Paséate

    Y así estar más cerca

    de tu paso.

    El cielo respira

    Tu profundidad en ecos

    Pluma a pluma

    Llego a tus alas

    Donde arden

    Multiversos sinfónicos.

    Un espejo

    Arrojado al mar

    Una luz suave

    Caliente en mí

    Besa

    Fugaz

    Centelleante

    La desnudez.

    En un espejo

    Tú eres mía

    Página 74/96

  • Antología de Dreamss

    Lo veo

    En la humedad

    En la grieta

    en las pupilas

    Que tú cultivaste

    Cuando gentilmente

    Decidiste amarme.

    Eres la única

    Cosa que importa.

    En mí

    Una luz suave

    pende

    En este rincón

    Y se lleva

    Con claridad de luna

    Un don de desgracia

    Que sería el mucho ver.

    Te veo

    En cada poro de mi cuerpo

    En las señas

    Que me hacen

    La eternidad.

    Sin ti

    La casa está vacía

    Cuando no sabes que decir

    Y tus ojos

    Degradan este silencio

    En mi alma

    Este silencio...

    Ven gentilmente.

    Página 75/96

  • Antología de Dreamss

    Del amor y otras palabras

    "Se termina la búsqueda y el tiempo.

    Vencida y condenada

    Por no hallar la palabra que escondiste"

    (Stella Díaz Varín)

    Como luz bajo el mar

    que irrumpe sobre la oscuridad,

    crece un gran manantial

    que cubre las piedras desnudas de mi ser.

    Un corazón de roca,

    como panal de manantiales dulces.

    Una luna oceánica

    de olas de puros astros minerales.

    Un rocío de mañana

    que enriquece el erizado campo de mi piel,

    piel que ya no es piel;

    sino una latitud de lo que tú llegaste a ser.

    Y entiendo que en mí haya parte de ti.

    Eres solsticio sobre el mar.

    Un satélite de flores.

    Eres la miel del panal.

    El silencio de las musas

    de un pintor surreal.

    Quien toma mi mano

    en el amor y el dolor.

    No llores alma mía,

    aunque seas distante,

    aunque la necesidad

    de ser solitario y advenedizo

    Página 76/96

  • Antología de Dreamss

    en un mundo intolerable,

    te haya entregado un don que nunca quisiste;

    Virtud de sufrieses

    carencias y tribulaciones.

    Corriendo con agotados espasmos

    y soportándolo todo.

    La paciencia no esta colmada de flores,

    como el orgullo, la gloria terrenal,

    el amor enmascarado y pasajero de la juventud;

    alardean en un beso

    y esconden un corazón precoz,

    preso en la desidia de un fruto

    tan apetecible como la primera tentación.

    En ese espacio, había un don parcial

    de creerme menos miserable en un cuerpo perfecto,

    sin por ello entender la altura de mi alma.

    Cómo te darías cuenta...

    Todo lo podía ese día,

    mis pasiones iban por delante,

    al fin rompería el silencio,

    silencio aquel de abril:

    Degradada, monocromática, vaga.

    Como tus pies de pluma:

    Invariables.

    Tu encendida boca de coral:

    Inmersa.

    La húmeda constelación de tus ojos:

    Inconclusa.

    ¿Era lo mejor precipitarse?

    Por favor alma mía nunca digas

    que te han desamparado,

    si entendieras que tan solo el amor,

    tan solo el amor,

    el amor,

    Página 77/96

  • Antología de Dreamss

    es lo que te han heredado,

    lo que te ha sustentado,

    lo que te ha levantado.

    Por qué decirte que no mires al mundo,

    ¡Míralo!

    Y aunque te induzcan al consentimiento.

    Su arte de sogas,

    de revolver,

    cuchillas oxidadas.

    Hoy las heridas no sólo van de boca en boca,

    la poesía lastima,

    la sinfonía lastima,

    la pintura lastima,

    "la tibia voluntad de tu pie" lastima.

    Deja pequeña niña

    que se ensañe la luz,

    que te inunde,

    que te atormente,

    embárrala con tus manos

    y desecha el veneno rosa

    de la estepa desnuda y erizada.

    Qué importaba tu fragilidad prohibida,

    qué tu silueta desheredada,

    qué tu fragancia de azucena virginal.

    Los nervios están colgando,

    ya no tienen retorno.

    Qué manos, qué piel, qué cabello

    alcanzarán el favor apetecido

    del zarpazo de la muerte.

    En el amor a medida imaginaria

    agoniza entre las sábanas tu secreto,

    la agotada labranza de tu piel.

    Silenciosa es la atracción en inicio,

    mas cuando la fiera fantasía

    Página 78/96

  • Antología de Dreamss

    inicia el certero encantamiento de manos enloquecidas

    dónde queda tu camino...

    La fruta en el suelo se pudre,

    la simiente se entrega a los elementos,

    los ciclos bailan sobre la tierra,

    y la tierra pide lluvia del cielo.

    Mujer adolescente,

    Qué pides tú.

    Página 79/96

  • Antología de Dreamss

    Distante

    "El hombre acerca sus labios al espejo...

    pero se le hiela el alma".

    (Juan José Domenchina)

    Distante.

    Tan lejos en la ausencia

    y siempre distante.

    El poeta exhala por el lápiz,

    el cuaderno se empaña,

    escudriña ansioso su futuro,

    no existe el oro ni la plata.

    Entonces el poeta mira en el cuaderno

    y sólo ve la crudeza de su entrañas.

    ... (y sólo ve la crudeza de su entrañas)

    Distante.

    Tan lejos en la ausencia

    y siempre distante.

    El poeta no sabe lo que quiere

    entonces opta falaz deshojarse,

    añade virtud de otoño a su yugo

    y yerra a sabiendas su parte.

    Entonces el poeta mira en el cuaderno

    y sólo ve menudencias de su arte.

    ... (y sólo ve menudencias de su arte)

    Distante.

    Página 80/96

  • Antología de Dreamss

    Tan lejos en la ausencia

    y siempre distante.

    Página 81/96

  • Antología de Dreamss

    Se cierra una puerta

    Acariciar la nulidad de los días

    Como una pequeña perra sin techo ni hueso.

    Nuestra carencia suplía los actos

    Y nuestra esperanza entonces

    Se basaba en la tregua de los días.

    El cielo rompería el silencio y una ventana se abriría,

    Mientras tanto todo se pierde pobremente y cómplice

    de un sentir extraño, como precipitado,

    como cuando no comprendes tu propia poesía,

    o falta el pan en la mesa, o un plato de comida

    y estás al borde de un abismo que llamamos oscuridad;

    la muy glamurosa sociedad,

    ya sin miedo a caer, sino a volar

    pero pónganlo, esa sonatita de muchedumbre

    que haga fondo al caos, a ver si es tan cierto

    háganmelo saber, el día en que toque fondo

    y mi sonrisa se armonice

    en la más irremisible oscuridad.

    Página 82/96

  • Antología de Dreamss

    Musa

    Árbol,

    su sombra en la ventana,

    perfil que a la luz

    tantea el alma.

    Espacio o perfil,

    eres como ella

    moviéndolo todo

    con fuerza.

    Y estoy yo

    ocupando un espacio

    junto a ti,

    hay sombras en la ventana,

    entre luna y niebla

    el sol se nubla

    pero tu rostro brilla.

    Afuera llueve

    Adentro

    Caen palabras.

    Página 83/96

  • Antología de Dreamss

    Otra figura

    Si fuera esa luz

    No vería mi sombra.

    La luna tiene dos lados

    Pero es una

    en el firmamento.

    Si lo veo únicamente desde un punto

    debo decirlo,

    caería en la tentación,

    aquel espacio es inmenso

    y no es fácil dejarlo.

    Miro ahora lo que piso

    agudizo mi tacto,

    y mi sombra dice

    ''quiero''

    y este cuerpo de pecado

    lo intercepta.

    Página 84/96

  • Antología de Dreamss

    Presente

    Ninguna ventana cerrada,

    Este hombre llora,

    Con su mirada de centro oscuro.

    ''soy ahora la luz''

    presiona los dientes

    Todo lo suspira o lo inventa.

    Ante la luz,

    su voz se hace pequeña.

    Piensa, ''hoy también tengo miedo a volar''

    Y se deja caer,

    como olvidado discípulo,

    A ver

    si toca fondo.

    Página 85/96

  • Antología de Dreamss

    Gymnopédie

    Suspira,

    Se abre una ventana

    En aquellos siglos

    tan derruidos.

    Te sueño

    Donde conocimos

    el aire,

    el crujido dorado,

    los trigales,

    el color de las piedras.

    Donde por primera vez

    ignoré las concepciones,

    Junto a tu fuego,

    inexplorado

    Tu alta mar.

    La flor que se hunde

    tu segada contextura.

    Y allí,

    aprisioné tu llama

    tu cuerpo,

    tu superficie celeste

    Algo tras de ti

    se pone una capa,

    Besa mi sombra,

    sobre una pira de topacio.

    Y se eleva

    a la plenitud del cielo,

    junto al primer Gymnopédie.

    Página 86/96

  • Antología de Dreamss

    Pequeña

    Veo una pluma caer,

    Ligera como la gota de sol

    Sobre una hoja.

    Y tus ojos;

    La lengua del solsticio

    Que brilla en los míos,

    Almena alta,

    De arrullar atalayas

    Ahhh... Cuando te veo,

    pequeña,

    creo aún más en Dios.

    Trajiste tu paso leve

    A cien de los días

    Orlando mi horizonte,

    Mi madre selva salina,

    La arena entre mis tallos

    Jóvenes aun

    Y queriendo lo que Dios me dio.

    Llegaste como la noche

    Con su aroma rojo

    Envolviéndome

    como a su criatura,

    Desvelada.

    Y para así hacerme degradar en tu beso

    Tu son de arpa inclinada.

    Tal los juncos

    Eres tan preciada.

    Tu velamen decaído

    Al cerrar tus ojos

    Golpea mi brisa, pequeña.

    Página 87/96

  • Antología de Dreamss

    Tu riachuelo de escaramuza

    Sondea mis entrañas,

    casi Inexploradas.

    Y a tu diestra

    Bendiciendo mariposas de agua

    Que caen

    como astros montañeses,

    con ternura, amada.

    No lo sabes

    Pero te veo caer

    suavemente

    Como una pluma.

    Y yo aquí zurciendo el barro en mi pecho.

    Te haría de greda

    y otros elementos

    Pero al verte,

    No puedo verte

    Tu piel

    me hace llorar.

    Página 88/96

  • Antología de Dreamss

    Mujer aurora

    ''Yo dormía, pero mi corazón velaba''

    (Cantares 5:2)

    Llegaste como la aurora

    Dejando atrás las estrellas

    y quedándote aquí sola.

    Estrella dulce y solitaria del día,

    corazón de cerezo.

    Con tu olor a madera

    y ternura de renuevo.

    Trajiste tu boca con palabras de sol

    Que salen de tus labios

    como una filacteria marina.

    Tu escandido

    humareda de sonrisas

    condensada en el subterráneo

    donde vivo y florezco.

    Amanecen rondando flores

    con tu mano lazarilla,

    Para ser el arroyo de esfuerzo bruto al pez

    Envuelto en lo desconocido

    pero sabido al cien

    Por un camino para renacer

    en la sed de una semilla.

    Y aquí, junto a las jarcias vibrando,

    Elevo banderas pretenciosas

    de que mi mano te vierte.

    Te hago sol y yo satélite,

    Estrella y yo asteroide.

    Con ser tú mi pictografía

    para una diástole final.

    Página 89/96

  • Antología de Dreamss

    Estrella roja de la pasión,

    Frente de luna.

    Quédate sin querellas de tu remar seguro,

    Sin dolor de alejar tu velo en la brisa,

    O como

    labranza de bienaventurados

    Parados

    bajo el marco de la iglesia

    Dando

    una bienvenida de calor y armonía

    Para mirarte en tu estado sublime,

    En tu gravitar etérea.

    Dulce lucero de la mañana

    Desgastándose los bordes

    Como magnolia de otoño sideral.

    Quédate aun más

    bajo la escarchada nebulosa

    que grita con la garganta

    hirviendo de dulzura

    Amor mío,

    serena,

    primavera que toca con sus dedos

    las altas copas

    Enciérrate en mis nudillos,

    Da paso libre a las aves del sol

    Y así escribirte un poema de caricias

    Que cante sobre la esencia

    de tu amor.

    Página 90/96

  • Antología de Dreamss

    Haikú libre

    Tu luz otoñal,

    De pronto tu sonrisa,

    Soy mil palabras.

    *******

    Frente al río

    Ya caen mis lágrimas,

    Frío espejo.

    *******

    Mamá lavando,

    Calcetines colgados,

    Verano y sol.

    *******

    Del otro lado

    La luna de invierno.

    Falta el leño.

    *******

    Déjalo libre

    Cantar en tu corazón,

    Jesús te ama.

    *******

    Página 91/96

  • Antología de Dreamss

    Como la nieve,

    Como la luna llena,

    Pálida eres.

    *******

    Yo sonreía

    Escupiendo las pepas

    De la sandia.

    *******

    Te amo niña,

    Preguntad las estrellas

    Tus compañeras.

    *******

    Robé un salmón

    Me dolió el corazón

    ¿Santidad en mí?

    *******

    Ya llega el sol

    Con su viento solano,

    Al río me voy.

    *******

    Los pescadores

    Pescadores de hombres

    Se convirtieron.

    *******

    Página 92/96

  • Antología de Dreamss

    Hoy recuérdame

    Tu poeta otoñal,

    Caen las hojas.

    *******

    En la faena

    la trucha es mi plata

    En el cuchillo.

    *******

    Cae la gota

    Como jugo de pera

    Bello verano.

    *******

    Tan lejos estás

    Como una estrella,

    Imposible es.

    *******

    Caudal, susurro,

    Leve viento de tarde.

    Cigarras al son.

    *******

    Si digo luna

    Llegará el invierno

    Para taparla.

    *******

    Página 93/96

  • Antología de Dreamss

    Diástole final,

    Vete frío invierno.

    Palpo las flores.

    Página 94/96

  • Antología de Dreamss

    El amigo que dejé

    Llegaste caído de no sé dónde

    sobre la tregua del veneno.

    Como una piedra que rompe el agua

    O el viento que abate lo seco.

    Ayer, ayeres

    Y la tarde

    Será siempre un antes

    Como pretérito,

    inacabado

    Yo sólo te recuerdo

    En esto he puesto la medida,

    Palabras anteriores,

    diferidas, hojas secas

    y la distancia. Oh luceros.

    El amor aumenta, el sol crece

    Piedra a piedra,

    suben las intenciones

    De verte algún día,

    Dejar atrás lo ausente.

    Antes que antes, los ayeres,

    El río que lleva peces muertos

    el sol que me estremece.

    Pienso en la mañana,

    dejar una parte de mi cuerpo,

    no lo sé

    la mano que sonríe

    o cada filamento,

    a la medida que nadie,

    nadie, nadie

    ... ni tú imaginas.

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  • Antología de Dreamss

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