25 de agosto de 2012Día de Énfasis en la Prevención Contra el Abuso y la Violencia

Autora del sermónDr. Cleri Becher de Mattos Leão

Psicóloga

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Apoyo y divulgación:Susy de Cayrus, UAUBFátima Liessi, UChYesely Salomon, UECynthia Martinez, UPClara de Ramos, UPNGloria Obando, UPSSoledad Sanchez, UU

Coordinación:Departamento del Ministerio de la Mujer de la División Sudamericana de la IASD

EdiciónArte: Casa Publicadora BrasileñaDiagramación: DSA Media CenterTraducción: Departamento de Traducción de la DSA

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ORDEN SUGERIDODEL CULTO

Preludio musicalEntrada de la plataformaDoxologíaOración de invocaciónDiezmo y ofrendasCanto para las ofrendasOración de dedicación de las ofrendasHimno de alabanza Oración intercesoraAdoración infantil: Historia 47: La mujer encorvada (Adoración Infantil 2012)Parte especialSERMÓN Himno de consagraciónBendición finalHimno de DespedidaPosludio

Un día escuché una historia de un célebre pintor, que después de haber pintado hermosas obras de arte, se con-venció que todavía no había pintado su obra maestra. Que-ría pintar el cuadro más bonito del mundo, y necesitaba inspiración.

Así que decidió salir a caminar para buscar lo más hermoso del mundo. Y fue así que se encontró con un sacerdote, al que le preguntó:

− Usted sabe ¿qué es lo más hermoso del mundo?Y el sacerdote le respondió:

− Es muy simple, lo más hermoso del mundo es la fe. Créame, que cuando la encuentre, sabrá que eso es lo más hermoso del mundo.

El joven pintor continuó su caminata pensando en las palabras del sacerdote: –Fe, lo más hermoso del mundo.

No avanzó mucho, cuando se cruzó con un soldado en misión, lo interrumpió y le preguntó lo mismo que al sacer-dote. La respuesta del soldado fue:

− Lo más hermoso en el mundo es la paz. La guerra es lo más horrendo que existe.

El pintor seguía confundido y se preguntaba: – ¿Cómo puedo pintar la fe y la paz?

Mientras meditaba en el camino de regreso, encontró a una pareja de enamorados y les preguntó:

− ¿Me pueden decir, qué es lo más hermoso del mundo? − Es simple, le respondieron ellos, lo más hermoso en el

mundo es el amor.El joven pintor, volvió a su hogar preguntándose, cómo

podría pintar en un cuadro lo más hermoso del mundo: fe, amor y paz.

Al llegar a casa, sus hijos corrieron para encontrarlo, y en

AMOR ESRESPETO

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los ojos de sus hijos vio la fe de la que el sacerdote le habló. En el abrazo de la esposa sintió el calor del amor de los dos jóvenes enamorados, y en su hogar había paz.

Entonces pintó su obra maestra, a la cual llamó: “hogar, lo más hermoso del mundo”

Desde la creación del hombre en el Edén, en los planes de Dios y en los relatos históricos de la sociedad, existe un faro que ilumina toda la trayectoria de la humanidad: la familia.

Génesis 1:1, 2 “En el principio creó Dios los cielos y la tierra. Y la tierra estaba desordenada y vacía…”

Génesis 1:26 “Entonces dijo Dios: Hagamos al hombre a nuestra imagen…”

Génesis 2:18 “Y dijo Jehová Dios: No es bueno que el hombre esté solo; le haré ayuda idónea para él”

Génesis 1:31 “Y vio Dios todo lo que había hecho, y he aquí que era bueno en gran manera…”

La familia, es el laboratorio de todas las experiencias de nuestra vida. La cuna que meció nuestros sueños y don-de nos despertamos de las pesadillas, es también donde se desarrollaron nuestros ideales o donde se destruyó nuestra espontaneidad, donde las barras eran una buena protección para nuestro gatear inseguro.

Somos formados por nuestras historias, tenemos marcas heredadas y adquiridas que son parte de nuestra galería de arte o de subterráneos oscuros, escondites asustadores, don-de se esconden nuestras emociones.

Lo que somos, lo que tenemos o deseamos, cómo nos comportamos frente a la vida, todo está completamente co-nectado con las marcas trazadas en el trayecto del desarro-llo.

Nuestro hogar puede ser el laboratorio para cualquier tipo de experimento. Nuestros hijos y nosotros mismos so-mos el producto final o en fabricación.

La manera como somos vistos, escuchados, tocados, de-termina la manera de cómo veremos el mundo, su color diversificado.

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NUESTROS SENTIDOS CAPTAN EL ALIMENTO PARA EL ALMA¿QUÉ VEMOS CUANDO CRECEMOS?

La marca de nuestra mirada significa la importancia que tenemos mientras estamos frente a cualquier persona, el valor que poseemos está estampado en el brillo de los ojos de quien nos ve y del tiempo que ilumina nuestra alma.

El hilo conductor por donde la confianza y el respeto se unen, tiene un punto de partida en la manera y en el tiempo de la mirada de cada ser que desfila en la pasarela de la vida de todo ser humano. Por lo tanto, somos marcados a través de los ojos y miradas de aquellos que nos rodean o rodean nuestro caminar.

La mirada de manera silenciosa y sutil, ama u odia, aprue-ba o desaprueba, castiga o ignora, incentiva o desanima, sedu-ce o desprecia, calma o angustia, levanta o destruye, comparte o humilla y deja tantas otras marcas.

Los ojos de quien ve, interpretan, registran, guardan en la memoria la importancia de la mirada de quien nos mira.

El tiempo que dura una mirada también puede revelar satisfacción o tortura, encanto o desencanto, la cura o la en-fermedad. En la mirada está la intención de la dirección, del desear, del querer, de la importancia y del valor. La alegría o la tristeza del corazón son vistas de manera clara y transparente en el brillo reflejado en una mirada.

La exposición del dolor y del sufrimiento del alma, su grito y su llamada pueden ser bien interpretados, así como la súpli-ca atendida, cuando en las esquinas de la vida, dos miradas se encuentran.

Es importante la mirada, el oír y el toque que dejó marcas, pues todos son de valor inestimable, inmensurable.

Las marcas de los latidos del corazón de la madre son las primeras palabras escritas en la historia de cada uno de noso-tros. Antes de nacer, todos fuimos despertados en un compás que norteará nuestro caminar por la vida.

Este compás rítmico es interrumpido cada vez que la madre ve, escucha y siente algo que le desagrada. Entonces, el soni-do vendrá acompañado de contracciones en la pared uterina,

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y la velocidad en los latidos cardiacos despertará en el bebé, inquietudes que solo más tarde serán reveladas. Pero este es solo el puntapié inicial. Una madre puede alterar la relación o la comodidad del bebé a través de lo que escucha cuando acurruca a su hijo para amamantarlo. El sonido que viene del corazón de la madre le afectará para bien o para mal.

Cuando la madre amamanta a su bebé, y él rechaza la le-che, no es porque la leche este buena o mala, es porque el ruido de tambores y percusión, que sirve de acompañamiento o música de fondo es tan irritante que deteriora y compromete su apetito. El hambre del bebé no es saciada, ni el hambre fí-sica y emocional, tampoco la afectiva. La mirada de la madre, su calma y ternura en la hora de amamantar a su hijo, es un momento de magia sin igual en la relación, es el nutriente más importante de todos. La mirada se distancia del objeto de su amor (el bebé); los latidos del corazón, muestran el hecho y sin saber podría damnificar para siempre la marca de seguridad que el ojo a ojo tiene.

Es la mirada en los ojos de la madre, mientras mama, donde se establece el código de confianza que muchas personas tienen.

Las personas que no les gusta mirar a los ojos, son el resul-tado del abandono de la madre en mirar a su hijo mientras era amamantado.

¿QUÉ ESCUCHO CUANDO CREZCO?Somos formados por la mirada, por el oír y por el tocar de

muchas personas que desfilan en nuestras vidas.La mayoría de las marcas, provienen de los más cercanos.

La primera universidad está dentro del hogar y sus maestros son los que Dios nos dio: padres, abuelos, tíos, amigos íntimos, parientes cercanos.

Si ellos no estuvieran aprendiendo a los pies del Padre de los padres, ¿qué estarán enseñando?

“Y las repetirás a tus hijos, y hablarás de ellas estando en tu casa, y andando por el camino, y al acostarte, y cuando te levantes. Y las atarás como una señal en tu mano, y estarán como frontales entre tus ojos; y las escribirás en los postes de tu casa, y en tus puertas” (Deut. 6:7-9).

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En la primera infancia, las influencias perjudiciales son con-secuencia de los resultados de la relación entre madre e hijo, y del respeto que el padre tiene por ambos.

¡Cuánta responsabilidad tienen aquellos que, de una mane-ra u otra, contribuyen para que esta madre sea de inmenso va-lor y responsabilidad, y que cumpla su papel adecuadamente a lo largo de su trayectoria!

Todo lo que la madre escucha, ve o siente, se lo transmite a su hijo.

“No dejes que tu boca te haga pecar…” (Ecle. 5:6)Los hijos repiten lo que escuchan, y son el resultado del

respeto que confirmaron.Cuando escuchamos: “Soy burro”, “soy tonto”, “soy retar-

dado”, detrás de esto está el sonido repetido de: “Eres burro”, “eres tonto”, “eres retardado”. Como escuchamos tantas veces lo mismo, estamos obligados a creer que somos aquello.

Detrás de cada acto de bondad, seguridad, cariño, coheren-cia y amor, se destaca la tranquilidad del hogar y de la fami-lia de origen. Cuando vemos el producto, constatamos en qué medio fue generado.

Las marcas del carácter son matices que rocían la jornada de lo cotidiano.

Detrás de: “Soy calmo, bondadoso, inteligente, trabajador, verdadero”, también se esconde: “Eres muy bueno”, “eres muy inteligente”, “eres un genio, felicitaciones”, “eres lo máximo”, “estoy orgullosa de ti”. Y claro que también están escondidos padres bondadosos, amables, sabios que se aman y se respetan.

Un autorretrato es la reproducción exacta de lo que vieron en mí, y de lo que me hicieron saber, sin que me hubieran en-señado la forma correcta de ser, ¡y yo me la creí!

Muchos retratos perversos y equivocados son colocados en las galerías de exposición, gratuitamente y de manera irrever-sible.

Tantas veces el eco de “tú eres...” se repetía que fue fácil transformarlo en “yo soy…”.

Intente escuchar eso que decía “tú eres…” y vea que toda-vía dice “yo soy”. ¿Dónde está ese poder? ¡Usted puede cam-biar el adjetivo ahora!

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Hagamos una prueba y cada cual responda quién está detrás de cada sonido, y si vale la pena continuar dirigiendo su vida al escuchar las siguientes reglas:

Dijeron que “soy…”perezoso enfermouna pesteansioso durogordotontoimbécilflacomentirosoaguafiestasllorón inmadurosoplón … y ahora, ¿quién soy?

Es muy probable que usted esté en esta lista varias veces o tenga su lista personal, y tal vez las personas que se escondie-ron detrás de estas frases ya no vivan, o incluso usted crea que son actuales y verdaderas.

En todas estas frases se esconden marcas incisivas de falta de respeto por cada uno, y por sus capacidades, habilidades, velocidades.

EL TOQUESi el mirar y el oír despiertan en nosotros tantas reacciones

en partes tan pequeñas de nuestro cuerpo, ¿qué podemos decir del toque?

El área más extensa del cuerpo, más rica y más abandona-da es la que contiene los terminales nerviosos, cámaras secre-tas instaladas en todos los espacios de las grandes avenidas del cuerpo. Sacan fotos y mandan informaciones por neurorecep-tores extremadamente exigentes.

Cada toque produce las respuestas más variables posibles.

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Es como si nuestro cuerpo estuviera impregnado de ojos, oídos, narices, y lenguas para producir de manera clara e in-equívoca, todas las informaciones de este gran territorio. La manera del toque revela la importancia, el valor, el cuidado, el cariño, el respeto, el amor que este cuerpo tiene.

Quien ama, cuida. Quien cuida, tiene. Quien tiene, respeta.

La familia ocupa un papel de responsabilidad importante en la construcción de la persona. Fragmentos de: padre, ma-dre, abuelos, tíos y amigos se impregnarán en cada fase del desarrollo.

Mientras la madre toca a su hijo cuando lo baña, cuando le cambia el pañal, al tomarlo en brazos, cuando le da el re-medio; en todos estos momentos el pequeño bebé está regis-trando automáticamente en su memoria las marcas de amor o rechazo, de cuidado amoroso o de indiferencia, de respeto o desconsideración. Al ser amado se sentirá amado y amará, al ser rechazado, se sentirá inútil y rechazará.

Las marcas de valores se imprimen con diferentes huellas a lo largo de este proceso.

Los valores adquiridos en esta fase determinarán cómo el individuo pasará por cada portal de desarrollo en la vida. Ser un líder o un liderado, amado o rechazado, elegir o ser elegido, aceptar o rechazar ayuda, admitir o negar, son solo algunas de las posibilidades que serán usadas como escudo para la protec-ción del yo.

Estos retratos fieles revelan cómo se establecieron los víncu-los afectivos. El ser humano depende del amor, de la forma, del contenido y del tiempo de ejecución.

Pregunto: ¿Qué forma tiene su amor? ¿Cuadrado, redondo, triangu-

lar, o en forma de corazón?¿Cuál es el contenido? ¿Dulce, salado, picante o suave?¿Cuánto tiempo necesita para demostrar su amor?El niño que es amado, es feliz, ama y hace a los demás fe-

lices.El niño que es rechazado, es infeliz, rechaza, agrede, es tris-

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te y torna su mundo infeliz, sin respeto por sí, ni por los demás.El niño que es elogiado, aplaudido, aprobado, hace con pla-

cer lo que aprendió, y ayuda a otros con sus aplausos.El niño que es criticado, que se pone en ridículo, que se

avergüenza, al que se le falta el respeto, se vuelve tímido, aver-gonzado, inseguro, miedoso, siente culpa, es infeliz, se enfada, aíra, es acomplejado y hará lo mismo cuando crezca.

El niño que es acogido, acariciado, incentivado, que apren-de a ser paciente, cariñoso, que confía en sí mismo, distribuye sus frutos a quien los quiera.

El niño que es tratado con respeto, justicia, flexibilidad, to-lerancia, paciencia, desarrollará en sí sentido de justicia, amor, respeto y tolerancia.

El niño que es respetado en sus límites y velocidades, e in-centivado a superarlos, será vencedor y hará que su debilidad sea superada.

El niño que no es respetado en sus limitaciones y no es in-centivado, estará destinado al fracaso. Los jueces, sus padres, así lo decretarán.

El niño que tiene padres seguros, amables, tolerantes y fuer-tes, construyen un mundo mejor para que los adultos vivan.

El niño que es tratado con veracidad espontánea, y ve eso en sus modelos, será verdadero.

El niño cuyos padres dicen la verdad, pero hacen lo con-trario, será falso, disimulará y mentirá, hasta que aprenda con alguien otras lecciones de carácter.

La construcción del ser humano necesita de elementos bá-sicos como cualquier otra construcción: fundamento, amor, atención (la medida adecuada), disciplina, organización, lími-tes, determinación, constancia.

Si la obra de construcción no tiene consistencia en la ejecu-ción, cuán peligrosa se torna para sí y para otros.

Si una pared revela los descuidos de la mezcla, la calidad inexacta de sus ingredientes, el descuido de las manos que la prepararon, la falta de amor por el proyecto, ¿qué diríamos de las rajaduras afectivas y comportamientos provenientes de tal abandono?

Es suficiente una mirada a la persona para entender que la

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obra necesita ser retomada. Tal vez el cambio de constructor sea oportuno. Ellos pueden darle la oportunidad al yo para terminar la obra.

La manera más compleja en el universo es la comunicación a través del toque, porque los sensores miden milimétricamen-te cada acto y la memoria identifica, a través de sus recursos internos, las emociones desencadenadas por tal acto.

¿Qué revela su abrazo?¿Qué fuerza tiene su “buen día”?¿Qué encanto tiene su gesto?¿Qué tipos de toque prepara una linda noche de amor?¿Qué tipo de toque finaliza su día?Un toque de amor puede ser visto, en una camisa bien plan-

chada, en una mesa arreglada, en un pan fresquito, en un vaso de jugo, en un abrir y cerrar de ojos, en una mueca, en un ceder el lugar, en un canto angelical, en una mano llena de callos, en un jeans limpio, en un jardín florecido o en una fruta cosechada, en un muchas gracias, con permiso, buenas noches o Dios te bendiga.

No habrá papel suficiente para abarcar todas estas marcas, usted debe tener una colección de ellas que son especiales, y yo también. Pero sea cuales fueren, lo importante es descubrir rápidamente qué marcas de amor y respeto contienen.

Se deben tomar cuidados especiales, porque lo que vemos, escuchamos, tocamos, determinará la dirección de nuestra mirada, la amplificación del sonido y el desarrollo del interés. También tocaremos de manera acostumbrada, desastrada, causando marcas moradas y doloridas. Lo peor de todo eso es que lo haremos con todo lo que aprendemos, mirando, escu-chando o siendo tocados.

“Ninguna palabra corrompida salga de vuestra boca, sino la que sea buena para la necesaria edificación, a fin de dar gra-cia a los oyentes” (Efe. 4:29).

Cuando somos tocados de manera inadecuada, nuestras emociones están a flor de piel, y en esos instantes, en un lapso de segundos, tenemos el poder de elegir hacer la diferencia. Las mismas manos que acarician, cuidan, edifican, pueden agredir, destruir, herir, matar. La elección siempre será del yo.

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Dos segundo en nuestras manos, y un nuevo producto pue-de ser generado si el yo prefiere promover paz en vez de gue-rra. Tal vez en esos segundos la elección sea correr hacia Dios y escuchar: “… y aprended de mí, que soy manso y humilde de corazón; y hallaréis descanso para vuestras almas” (Mat. 11:29).

El tiempo de elegir es muy pequeño para generar un tiempo lleno de sufrimiento. ¿Por cuánto tiempo vale su decisión? ¿Ya pensó en el costo?

Una elección de placer que no supera los tres segundos pue-de durar para el resto de su vida, como un hijo no planificado.

Un momento de victoria en la guerra de la fuerza, puede generar años de prisión.

Un momento para oler por segundos, puede despertar una dependencia que lo hará prisionero del vicio, ¿por cuánto tiempo?

Una palabra maldita puede matar personas y sentimientos.“La blanda respuesta quita la ira; mas la palabra áspera

hace subir el furor” (Prov. 15:1)¡Qué poder tiene el menor órgano del cuerpo! La lengua

al estar de acuerdo con un pensamiento acelerado es un yo impulsivo.

“La muerte y la vida están en poder de la lengua, y el que la ama comerá de sus frutos” (Prov. 18:21)

Jamás podemos inutilizar nuestros actos con la disculpa de que: yo dije, yo lo hice porque el otro lo hizo primero. La elec-ción es personal e intransferible, solo el yo es el responsable por la acción.

Poco importa el verbo, o su tiempo presente, pasado o futu-ro, la elección fue, y siempre será la primera persona singular, el yo, y su poder solo se encuentra en el presente.

Analice antes, su elección tiene un precio, ¿puede pagarlo?¿Su elección tiene un plazo? ¿Su elección solo sirve para

usted?“… os he puesto delante la vida y la muerte, la bendición y

la maldición; escoge, pues, la vida, para que vivas tú y tu des-cendencia” (Deut. 30:19).

Somos frutos de las elecciones que hicimos en el pasado.

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Si la lección no fue aprendida, repetiremos las mismas faltas que ya generaron castigo y en el futuro pagaremos las multas, porque ellas llegarán.

La elección de descansar es acumulativa.¿Cómo está su cuenta? ¿Qué saldo ha dejado para el otoño

de su vida?“Así, todo buen árbol da buenos frutos, pero el árbol malo

da frutos malos” (Mat. 7:12)Lo que dice tiene exactamente lo que su deseo determina.

Si el tono es dulce y tierno, lo que viene no podrá ser diferen-te; y si lo fuera, significa que el otro no aprendió en la misma escuela y es su responsabilidad enseñarle nuevamente. Cuando un alumno no aprende la lección, está diciendo: por favor, en-séñeme de nuevo, profesor.

Reflexione en las frases de la Madre Teresa de Calcuta.“Da siempre lo mejor… y lo mejor, vivirᔓMuchas veces, las personas son egocéntricas, ilógicas e in-

sensatas. Perdónales, aun así.Si tú eres gentil, las personas pueden acusarte de egoísta,

interesado. Sé gentil, aun así.Si tú eres un vencedor, tendrás algunos falsos amigos y algu-

nos enemigos verdaderos. Vence, aun así.Si tú eres honesto y franco, las personas pueden engañarte.

Sé honesto, aun así.Aquello que te ha llevado años construir, alguien puede des-

truirlo de una hora para otra. Construye, aun así.Si tú tienes paz y eres feliz, las personas pueden sentir envi-

dia. Sé feliz, aun así.Da al mundo lo mejor de ti, pero eso puede nunca ser lo

bastante. Da lo mejor de ti, aun así.Mira que, el final de las cuentas, es entre tú y Dios. Nunca

ha sido entre tú y las demás personas”.Dios eligió amar. “Porque de tal manera amó Dios al mun-

do, que ha dado a su Hijo unigénito, para que todo aquel que en él cree, no se pierda, mas tenga vida eterna” (Juan 3:16)

Jesús eligió amar. “La paz os dejo, mi paz os doy; yo no os la doy como el mundo la da…” (Juan 14:27)

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¿Qué eliges hoy?Dios eligió respetar tu elección. Difícil elección es entender

ese amor.¿Qué tipo de amor y a quién enderezarás hoy?La forma de mi amor y mi respeto están en las palabras que

escribí. Recíbalas como un ramillete de las flores que más le gustan.

Dra. Cleri Becher de Mattos LeãoPsicóloga

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NOTAS___________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________