sentidos de la victimizaciÓn y agencia de las vÍctimas

70
SENTIDOS DE LA VICTIMIZACIÓN Y AGENCIA DE LAS VÍCTIMAS: Una mirada a los proyectos de Fortalecimiento a Unidades Productivas y Estrategias de Comercialización de productos, implementados por la Alcaldía de Medellín. CATHERINE DUQUE CHALARCA

Upload: others

Post on 12-Jul-2022

6 views

Category:

Documents


0 download

TRANSCRIPT

Page 1: SENTIDOS DE LA VICTIMIZACIÓN Y AGENCIA DE LAS VÍCTIMAS

SENTIDOS DE LA VICTIMIZACIÓN Y AGENCIA DE LAS VÍCTIMAS:

Una mirada a los proyectos de Fortalecimiento a Unidades Productivas y Estrategias de

Comercialización de productos, implementados por la Alcaldía de Medellín.

CATHERINE DUQUE CHALARCA

Page 2: SENTIDOS DE LA VICTIMIZACIÓN Y AGENCIA DE LAS VÍCTIMAS

Director del Cider

Óscar Armando Pardo Aragón

Autora

Catherine Duque Chalarca

Directora del trabajo de grado

Diana Marcela Gómez Correal

Lectores

Interna: Camille Boutron

Externo: Luis Eduardo Pérez Murcia

2017

Page 3: SENTIDOS DE LA VICTIMIZACIÓN Y AGENCIA DE LAS VÍCTIMAS

Perfil académico y profesional de la autora

Socióloga de la Universidad de Antioquia y Magister en Estudios Interdisciplinarios

sobre Desarrollo de la Universidad de los Andes. Se ha desempeñado como

investigadora social en el sector público y privado y como interventora en el marco de

procesos de planeación local y presupuesto participativo implementados por la

Alcaldía de Medellín. Ha acompañado procesos desarrollados por ONGS locales como

la Consulta Ciudadana e Institucional para la ejecución de la Casa de la Memoria para

Medellín y la sistematización de la experiencia de retorno al municipio de San Carlos

para el Centro Nacional de Memoria Histórica (CMH). Su participación en estos

procesos motivó su interés por profundizar en temas relacionados con víctimas y

derechos humanos, y la llevó a querer abordar la relación entre victimización, agencia

y desarrollo humano en el marco de su tesis de maestría.

Page 4: SENTIDOS DE LA VICTIMIZACIÓN Y AGENCIA DE LAS VÍCTIMAS

1

RESUMEN

La investigación busca comprender, a la luz del Desarrollo Humano y algunos elementos de la

Teoría de la Estructuración, la relación entre victimización, agencia y desarrollo humano. Se

examina el caso de los programas de Fortalecimiento a Unidades Productivas y la Estrategia de

Comercialización de Productos Crisálidas, implementadas por la Unidad de Atención y

Reparación a las Víctimas de la ciudad de Medellín durante el periodo 2011-2015. El estudio

concluye que ambas iniciativas, al no corresponder con una visión de reparación integral, ofrecen

un escenario de ampliación de libertades que se estructura mayormente desde lógicas de desarrollo

económico, limitando la superación de los problemas estructurales como la desigualdad, la pobreza

y la exclusión que afectan a las víctimas. Se observa, además, la configuración desde los programas

del sentido de víctima principalmente como sujeto de ayuda, noción que posibilita su acceso al

sistema institucional de atención pero frente a la que algunas víctimas se resisten y/o se adaptan

estratégicamente. Finalmente, se vislumbra que los programas estatales habilitan capacidades en

las víctimas como las de emprendimiento, que en conjunción con su experiencia y reflexividad las

llevan a resignificarse y asumir nuevos escenarios y cursos de acción.

Palabras clave: Victimización, desarrollo humano, libertades, agencia.

Page 5: SENTIDOS DE LA VICTIMIZACIÓN Y AGENCIA DE LAS VÍCTIMAS

2

ABSTRACT

Under the light of Human Development and some elements of the Structuration Theory, The

research pretends to understand the relation between victimization, agency and human

development. The programs of Strengthening to Productive Units and Merchandising Products

Strategy “Crisálidas” implemented by the Medellin’s City hall through the Unit of Victims

Attention and Repairness between 2011 and 2015, were examinated. The research concludes that

both initiative, as they don’t match with an integral repairness vision, they just offer a place for

freedoms expansion mainly structured in economics development logics, which ties the

overcoming of structural problems such as inequality, poorness and the exclusion that affects

victims. Aditionaly, is observed from the programs the configuration of victims sense mainly as a

helped beings, notion that makes possible the access to the institutional system of attention, even

when some victims resist to this concept or they adapt strategically. Finally, is glimpsed that state

programs enable habilities in the victims such as entrepeneurship, which added with their

experience and reflexivity, take them to resignify and take on new scenarios and courses of action.

Keywords: victimization, human development, freedoms, agency.

Page 6: SENTIDOS DE LA VICTIMIZACIÓN Y AGENCIA DE LAS VÍCTIMAS

3

A las personas que de manera incondicional entregaron parte de su tiempo y abrieron su corazón para

contar sus experiencias, gracias por tanta generosidad y afecto.

A mi esposo, apoyo incondicional y compañero de viaje.

Page 7: SENTIDOS DE LA VICTIMIZACIÓN Y AGENCIA DE LAS VÍCTIMAS

4

TABLA DE CONTENIDO

1. INTRODUCCIÓN ................................................................................................................................................ 5

2. MARCO CONCEPTUAL .................................................................................................................................. 13

2.1. Sentidos construidos de la victimización ................................................................................................... 13 2.1.1. ¿La víctima como sujeto sacrificado o como ciudadano con derechos? Algunas consideraciones en

torno al concepto. ................................................................................................................................................ 13 2.1.2. Sentidos hegemónicos de la victimización ........................................................................................ 16

2.2. Víctimas y desarrollo humano: el sujeto víctima como agente del desarrollo ........................................... 18

3. MARCO METODOLÓGICO ............................................................................................................................. 24

4. RESULTADOS: LA VÍCTIMA COMO AGENTE DEL DESARROLLO HUMANO: UN SUJETO QUE SE

CONSTRUYE Y RESIGNIFICA EN LA INTERACCIÓN DE LO HEGEMÓNICO Y LO COTIDIANO .............. 28

4.1. Sujetos de la investigación y contexto de las iniciativas ............................................................................ 28 4.2. Sentidos de la victimización creados y reforzados: De la víctima como sujeto de ayuda a la víctima estratega

y emprendedora. ...................................................................................................................................................... 31 4.3. Víctimas y capacidad de agencia: Aportes y deficiencias de los proyectos en la ampliación de libertades

para el desarrollo humano. ...................................................................................................................................... 38

5. DISERTACIONES FINALES: LA VÍCTIMA COMO AGENTE DEL DESARROLLO HUMANO .............. 46

6. REFERENCIAS BIBLIOGRÁFICAS ................................................................................................................ 52

7. ANEXOS ............................................................................................................................................................ 56

7.1.ANEXO 1: Fases de la investigación ................................................................................................................ 56 7.2. ANEXO 2: Guía de entrevista sujeto víctima .................................................................................................. 57 7.3. ANEXO 3: Guía de entrevistas a funcionarios públicos unidad municipal de atención y reparación a víctimas

................................................................................................................................................................................. 59 7.4. ANEXO 4: Cuadro de categorías analíticas ..................................................................................................... 61 7.5. ANEXO 5: Cuadro de trayectorias de las víctimas .......................................................................................... 62 7.6. ANEXO 6: Ruta metodológica de los proyectos analizados ............................................................................ 66

Page 8: SENTIDOS DE LA VICTIMIZACIÓN Y AGENCIA DE LAS VÍCTIMAS

5

1. INTRODUCCIÓN

La relación entre victimización, agencia y desarrollo humano es un tema de gran importancia y

pertinencia en el campo de los estudios sobre desarrollo en el contexto colombiano. Por un lado,

porque la sociedad ha experimentado a través de los años problemáticas como la desigualdad, la

pobreza, la discriminación y la exclusión que se han constituido en procesos de larga duración que

han afectado fuertemente a la población y que, junto con otras causas, han operado como

generadores de los conflictos políticos y militares existentes (Cortés, 2006). En este sentido, el

país ha funcionado según lo planteado por Uprimny y Saffon (2009), retomando a Rawls (1973),

De Greiff (2006) y Kalmanovitzel (2009), como una “sociedad bien desordenada” donde la

desigualdad es imperante, los principios básicos de justicia no funcionan de manera efectiva y se

experimentan crisis humanitarias y frecuentes victimizaciones.

Este tipo de escenarios plantean grandes desafíos que involucran la comprensión del sujeto víctima

como un ser situado, que además del flagelo de la victimización, experimenta otras problemáticas

que tienen un peso importante como limitantes de su desarrollo humano; estas requieren de

soluciones mediante la implementación de medidas de justicia que contemplen la posibilidad de

ampliar las libertades de los individuos rescatando lo que tienen razones para valorar (Hoyos,

2008, retomando a Sen, 1995). Algunos estudios académicos ya han advertido la encrucijada que

se presenta en estos contextos, donde el Estado debe dar solución a las necesidades económicas,

sociales y culturales, a la vez que avanza en la implementación de medidas de justicia correctiva

en función de restablecer los derechos de las víctimas (Uprimny y Guzmán, 2010; Perez, 2013).

Por otro lado, esta relación plantea la necesidad de rescatar al sujeto víctima como un agente, es

decir, como una persona con capacidad de actuar y provocar cambios (Sen, 2000) y de ejercer

poderes causales en su vida cotidiana (Giddens, 2011), cuestionando posturas y sentidos de la

victimización que lo ponen en el plano de la pasividad en el marco de los programas institucionales

y de concepciones que le otorgan un carácter sufriente sin posibilidades de acción. En este sentido,

la presente investigación tiene como objetivo general comprender esta relación entre

victimización, agencia y desarrollo humano a través del estudio de caso de los proyectos de

Page 9: SENTIDOS DE LA VICTIMIZACIÓN Y AGENCIA DE LAS VÍCTIMAS

6

Fortalecimiento a Unidades Productivas (UP)1 y la Estrategia de Comercialización de productos,

implementada por la Alcaldía de Medellín en el periodo 2011-2015, considerando sus aportes en

la implementación de medidas que además del restablecimiento social y económico propendan por

la superación de problemas como la discriminación, la exclusión, la desigualdad, entre otros, y

posibiliten la actuación de los sujetos víctimas como agentes. Además de ser un estudio de caso,

esta investigación se propone rescatar la voz de las víctimas que participan en estos y de sus

miradas sobre los programas institucionales pensados para ellas. Por lo anterior, la misma cuenta

con los siguientes objetivos específicos, los cuales facilitan arribar a una mejor comprensión del

caso analizado: 1) Indagar por los sentidos de la victimización que construyen y refuerzan dichos

proyectos y, 2) determinar el aporte de los mismos en la ampliación de libertades para el desarrollo

humano y ejercicio de la capacidad de agencia de las víctimas.

Estudios de esta índole adquieren total relevancia en contextos como el de la ciudad de Medellín,

donde existen factores de vulnerabilidad en la vida de las víctimas que requieren soluciones

importantes. En caracterizaciones realizadas por la Alcaldía de Medellín (2012b), se resalta que

para esta fecha de la población víctima de desplazamiento encuestada un 4% practicaba la

mendicidad, un 21% obtenía parte de los ingresos de la donación de terceros y un 11% recibía

subsidios estatales. Además, que un 58% de dicha población, eran familias en condición de

pobreza que no alcanzan a cubrir mínimos de subsistencia. De acuerdo con el Plan de Desarrollo

Municipal 2012-2015, dicha ciudad es considerada el segundo escenario urbano con mayor

número de personas víctimas del conflicto armado, fenómeno que se constituye en uno de los

principales generadores de violencia urbana, aunque no el único, ya que pueden rastrearse otros

tipos de violencia asociadas con dimensiones socioeconómicas relacionadas con la inequidad y la

exclusión (Naranjo y Hurtado, 2004).

Con este panorama, la noción de víctima y la manera en que se ha significado cobra total

importancia, pues esto determina el enfoque de los procesos, modelos y programas que se

desarrollan en función de atenderla, asistirla y repararla. La categoría de víctima tiene su origen

inicial en el mundo religioso y del humanitarianismo. Adquiere centralidad en el siglo XX con el

Holocausto (Gómez, 2015), cuando empieza a ser reconocida a través de discursos y doctrinas

1 De ahora en adelante UP. “Se entiende por Unidad Productiva toda unidad de negocio que se dedique a la transformación de

materias primas/insumos, o la comercialización o los servicios a terceros (Alcaldía de Medellín, 2013, p. 8)

Page 10: SENTIDOS DE LA VICTIMIZACIÓN Y AGENCIA DE LAS VÍCTIMAS

7

como las de los Derechos Humanos. Uribe (2008), afirma que a través del Derecho de Gentes y

el Derecho Internacional Humanitario se pudieron establecer protocolos para proteger a la

población no combatiente, sin embargo, en este contexto más que ser concebidas como sujetos de

acción con derechos ciudadanos y portadoras de la verdad, fueron concebidas como individuos

pasivos y receptores de ayuda. Truñó (2010), comparte este planteamiento al considerar que los

Derechos Humanos fundan una concepción esencialista de la víctima en la que su condición es

determinada por violaciones a sus Derechos Humanos y el Derecho Internacional Humanitario,

sin tener la posibilidad de ser superada. Hablando del caso colombiano, esta misma autora plantea

que a través de marcos jurídicos como la Ley de Justicia y Paz, se le ha otorgado a la víctima una

etiqueta que distingue entre la víctima y la víctima-beneficiaria, donde sólo la segunda es acreedora

de la reparación.

No obstante, con el paso del tiempo, también se han desarrollado posturas que le atribuyen a la

misma un lugar como sujeto de derechos o como un “derechohabiente” (De Greiff, 2011), que

requiere ser reparado y cuya reparación compromete al Estado (Roht y Orlovsky, 2009), y se han

establecido procesos (como los Tribunales de Núremberg y Tokio), que han permitido que diversos

países las reconozcan políticamente, permitiéndoles emerger como “actores primarios de las

guerras”2 con derecho a la verdad, la justicia, la reparación y garantías de no repetición (Uribe,

2008). Estos mecanismos deben posibilitar la reivindicación y el restablecimiento de derechos que

construyan a las víctimas como ciudadanos en un contexto donde la ciudadanía es precaria

(Fuentes y Atehortúa, 2015), y donde podría considerarse que la victimización limita el ejercicio

de las libertades y opciones de las personas, en los términos planteados por Sen (2000).

En Colombia, la noción legal de víctima empieza a circular a partir de los años noventa y cobra

fuerza en el marco de la Ley de Justicia y Paz (Gómez, 2016). En esta Ley el reconocimiento de

dicho carácter estaba condicionado a la constatación de la victimización y limitada a determinados

tipos de violencia y responsables. Posteriormente, surge la Ley de Víctimas y Restitución de

Tierras (Ley 1448 de 2011), la cual involucra una definición más amplia de víctima contemplando

la responsabilidad de actores del Estado y considerando la existencia de víctimas directas e

indirectas. Este reconocimiento político ha traído un amplio despliegue de acciones de reparación

2 Concepto desarrollado por la investigadora María Teresa Uribe (2008) a través del cual las víctimas son concebidas como un

nuevo actor nuevo que aparece en la escena pública y que cuenta con una identidad propia. Incluye sujetos, grupos sociales o

étnicos.

Page 11: SENTIDOS DE LA VICTIMIZACIÓN Y AGENCIA DE LAS VÍCTIMAS

8

y de medidas de justicia transicional, además de políticas sociales y económicas pensadas con el

fin de atender y asistir a las víctimas.

La reparación como medida de justicia transicional y como parte del discurso del Derecho

Internacional Humanitario permite instaurar una definición de víctima no sólo como sujeto de

derechos sino también como sujeto que demanda el reconocimiento de los actores involucrados en

la vulneración y le otorga responsabilidad al Estado en cuanto debe asumir el compromiso público

de responder por estas violaciones (ICTJ, Magarell, s.f). Según lo plantea la Asamblea de Naciones

Unidas en la Resolución 60/147 del 16 de diciembre de 2005, la reparación debe ser adecuada,

efectiva y rápida, y debe promover la justicia cuando de violaciones al Derecho Internacional

Humanitario y a los derechos humanos se trata. De esta manera, una reparación integral comprende

cinco elementos: restitución, indemnización, rehabilitación, satisfacción y garantías de no

repetición, directriz también adoptada por Colombia en la Ley de Víctimas y Restitución de Tierras

(1448 de 2011).

El concepto de reparación ha sido ampliamente debatido, ya que existe una tendencia a confundir

la reparación con políticas sociales en beneficio de las víctimas (Pérez, 2013). De Greiff (2006),

por ejemplo, establece una aclaración conceptual del término, diferenciando aquellas reparaciones

que se dan en el contexto del derecho jurídico y el internacional, entendidas como todas las

medidas que se emplean para corregir los daños ocasionados a las víctimas; de las reparaciones

dadas en el campo de los programas estatales, donde el uso del concepto tiene un sentido más

restringido y deja de lado otros elementos como la justicia, la verdad y la reforma institucional.

Pérez (2013), por su parte, deja por sentada la distinción entre políticas sociales como medidas de

asistencia social para las víctimas que responden a obligaciones inmediatas y, la justicia reparadora

que responde a obligaciones progresivas. En el contexto colombiano la Ley de Víctimas (Ley 1448

de 2011), establece una diferenciación entre las medidas de reparación y las medidas de asistencia

a las víctimas, planteando que si bien las segundas pueden tener un efecto reparador, no sustituyen

o remplazan a las medidas de reparación (art.25, par.1°). Roht y Orlovsky (2009), la distinguen

por su carácter procesual, argumentando que “las reparaciones, al igual que el desarrollo, son un

proceso, no un bien que se entrega” (p. 571).

Esta discusión es pertinente para el estudio del caso que convoca esta investigación. Aunque los

proyectos estudiados se enmarcan en un actual modelo local de atención y reparación que

Page 12: SENTIDOS DE LA VICTIMIZACIÓN Y AGENCIA DE LAS VÍCTIMAS

9

respondió a una transformación institucional generada en la ciudad a partir de lo dispuesto en la

Ley 1448 de 2011 y a través del cual se instauró la Unidad de Atención y Reparación a las Víctimas

del conflicto armado de la ciudad (UMARV); reúne medidas ya implementadas para la atención a

las víctimas como las concernientes al desplazamiento forzado3 y fija la transición de instituciones

existentes, fusionando instancias y departamentos (Alcaldía de Medellín, 2013). El programa de

Autonomía Económica de dicha Unidad se enmarcó dentro del componente de Restablecimiento

operando a través de medidas de estabilización socioeconómica4 para asistir a esta población

(Alcaldía de Medellín, 2013b).

En el marco de este subcomponente se han implementado el proyecto de creación y

Fortalecimiento a Unidades Productivas (UP) y la estrategia de comercialización de productos

denominada Crisálidas Emprendiendo Sueños (Alcaldía de Medellín, 2013b). El primer proyecto

en mención, tiene como objetivo apoyar la creación o fortalecimiento de negocios de las víctimas

del conflicto armado en la ciudad a través de formación, asistencia y/o apoyo económico (Alcaldía

de Medellín, 2013b). El segundo, busca integrar a las mismas, concebidas en este contexto como

“emprendedores y emprendedoras”, a dinámicas del mercado actual, ayudando en la

comercialización de sus productos (Alcaldía de Medellín, 2013b). En este proceso han participado

principalmente víctimas del desplazamiento forzado, en su mayoría mujeres5, cuya trayectoria

laboral ha sido de carácter “informal”6. En el año 2013, la UMARV expresó haber acompañado a

3 La Ley 387 de 1997 en su artículo 17º plantea, acerca de las medidas de estabilización socioeconómica, que “el Gobierno Nacional

promoverá acciones y medidas de mediano y largo plazo con el propósito de generar condiciones de sostenibilidad económica y

social para la población desplazada en el marco del retorno voluntario o el reasentimiento en otras zonas rurales o urbanas. Estas

medidas deberán permitir el acceso directo de la población desplazada a la oferta social del gobierno, en particular a los programas

relacionados con: 1. Proyectos productivos. 2. Sistema Nacional de Reforma Agraria y de Desarrollo Rural Campesino. 3. Fomento

de la microempresa. 4. Capacitación y organización social. 5. Atención social en salud, educación y vivienda urbana y rural, la

niñez, la mujer y las personas de la tercera edad, y 6. Planes de empleo urbano y rural de la Red de Solidaridad Social.

Sólo hasta el año 2007 se formaliza la Política Pública local de Atención y Prevención al Desplazamiento Forzado (Acuerdo 049

de 2007) en la ciudad de Medellín, y posteriormente, en el 2009 se crea la Gerencia para la Coordinación y Atención de la Población

Desplazada, adscrita a la Secretaría de Bienestar Social de la ciudad (Corporación Región, 2011). Con la readecuación del modelo

de atención y reparación a la población víctima de la ciudad, dicha gerencia entra a hacer parte de la UMARV y se retoma la

experiencia de la misma en la atención y asistencia esta población. 4 Si bien estas son medidas de estabilización socioeconómicas que buscan un efecto reparador y son implementadas en el marco de

la política local de Atención y Reparación a las Víctimas, estas obedecen a un enfoque asistencial y, por lo tanto, es importante que

las mismas se conciban como un proceso con el deber de trascender la lógica asistencial y constituirse en escenarios de reparación

integral y de promoción del desarrollo humano de los sujetos víctimas. 5 La mujer se ha constituido en un sujeto ampliamente victimizado en el marco del conflicto armado en el país, constituyéndose en

una población de gran importancia para los procesos de reparación. La particularidad de su condición y su carácter de víctima

directa e indirecta la han configurado como un sujeto activo de diversas iniciativas institucionales. 6 Para efectos de este ejercicio, el trabajo de carácter informal será entendido de acuerdo con los parámetros definidos por la

Organización Internacional del Trabajo OIT, en la Resolución relativa al Trabajo decente y la Economía Informal (2002): “Entre

los trabajadores de la economía informal hay trabajadores asalariados y trabajadores por cuenta propia. La mayoría de los

trabajadores por cuenta propia se encuentran en condiciones tan inseguras y vulnerables como las de los trabajadores asalariados,

Page 13: SENTIDOS DE LA VICTIMIZACIÓN Y AGENCIA DE LAS VÍCTIMAS

10

2400 familias que contaban con escasos ingresos y bajos niveles de productividad como producto

de su dificultad para acceder a los mercados laborales en el contexto de la ciudad.

De esta manera, aunque por sus características estos proyectos operan como programas de

asistencia a las víctimas7, existen esfuerzos porque estas medidas tengan un “efecto reparador” en

los términos en que lo plantea la Ley 1448 de 2011 (art.25, par.1°), que pueden vislumbrarse en el

interés de garantizar una dimensión procesual (Roht y Orlovsky, 2009), insertando en las acciones

estabilizadoras el discurso del emprendimiento. Un ejemplo de ello lo ofrecen las siguientes

afirmaciones: “La población intervenida tiene falencias en la lectoescritura, esto implica cambiar

las metodologías teniendo que acudir al recurso experiencial como lo sugiere la propuesta

metodológica del proyecto, para movilizarlos de posturas rígidas frente al cambio que demanda la

actividad que realizan, refiriéndose a dicha situación en los términos: “emprendedor”,

“empresario”, “comerciante” y “microempresario” de cara a que este rol sea una realidad

perdurable en el mediano y largo plazo y se limite un poco el avance en el proceso de formación

por el corto tiempo” (Alcaldía de Medellín, 2013c, p. 69).

Considerando este interés de la institucionalidad, la presente investigación buscó analizar los

proyectos en mención, rescatando la importancia de que trasciendan la lógica asistencial y se

constituyan en medidas reparadoras e integrales que no se limiten exclusivamente al plano de los

“servicios económicos y las oportunidades sociales” (Sen, 2000). Lo anterior podría posibilitar la

significación de la víctima como un sujeto de derechos y apuntar con más eficacia a la ampliación

de sus libertades y capacidades, y podría ser propicio a la construcción del sujeto víctima como

agente del desarrollo humano que puede experimentar transformaciones en su vida cotidiana y

soluciones de los problemas de desarrollo que enfrenta.

A partir de lo anterior, se establecieron diversas preguntas de investigación que guiaron el análisis:

¿Qué sentidos8 de la victimización crean y refuerzan los proyectos?, ¿Qué sentidos de la

y pasan de una situación a otra. Dado que carecen de protección, derechos y representación, esos trabajadores suelen quedar

atrapados en la pobreza” (p. 25/61). 7 Ver Ley 1448 de 2011, artículo 49: ASISTENCIA Y ATENCIÓN. Se entiende por asistencia a las víctimas el conjunto integrado

de medidas, programas y recursos de orden político, económico, social, fiscal, entre otros, a cargo del Estado, orientado a restablecer

la vigencia efectiva de los derechos de las víctimas, brindarles condiciones para llevar una vida digna y garantizar su incorporación

a la vida social, económica y política. Por su parte, entiéndase por atención, la acción de dar información, orientación y

acompañamiento jurídico y psicosocial a la víctima, con miras a facilitar el acceso y cualificar el ejercicio de los derechos a la

verdad, justicia y reparación. 8 La noción de sentido surge en el marco de la corriente de pensamiento fenomenológico desarrollado por Husserl (citado por

Herrera, 2010), para quien “el mundo de la vida” está cargado de sentido presupuesto de antemano para el hombre del cual el ser

Page 14: SENTIDOS DE LA VICTIMIZACIÓN Y AGENCIA DE LAS VÍCTIMAS

11

victimización construyen las víctimas a partir de su experiencia de participación en los proyectos?,

¿Cuáles son los aportes de los proyectos en la ampliación de libertades para el desarrollo humano

y ejercicio de la capacidad de agencia de las víctimas?, y finalmente, ¿permiten los proyectos de

Fortalecimiento a Unidades Productivas y Estrategias de Comercialización de productos, la

construcción del sujeto víctima como agente del desarrollo humano?

Preguntas de esta índole son pertinentes en el campo de los estudios sobre desarrollo, que si bien

cuenta con importantes aportes en este sentido, se constituye en un campo de conocimiento que

aún no se agota y que requiere seguir siendo explorado, más aún en contextos de transición política

como el que vive en el presente Colombia. Gran parte de la literatura que relaciona conceptos

como victimización, agencia y desarrollo humano, terminan en propuestas que se centran

principalmente en abogar por nociones como la “reparación transformadora”, como una manera

de ligar la agencia de las víctimas y la ampliación de capacidades y libertades con el campo

especifico de la reparación de las víctimas (Uprimny y Saffon, 2009; De Greiff, 2009; Uprimny y

Guzmán, 2013). De igual manera, la perspectiva de género en estudios conceptuales y empíricos

que establece vínculos entre dichos conceptos, han ocupado desde hace bastantes años un lugar

importante en la literatura nacional e internacional. López y Lemaitre (2013), por ejemplo, han

explorado la categoría de reparación transformadora con enfoque de género, mientras Truñó

(2010), ha realizado estudios que parten de las subjetividades y miradas de las mismas acerca de

la victimización y de los discursos que se han configurado en las leyes y las instituciones para

atenderlas.

La presente investigación buscó ir más allá de estas reflexiones y aportes, y explorar esta relación

anclada al caso del proyecto de Fortalecimiento a Unidades Productivas y la Estrategia de

Comercialización de productos Crisálidas, desde varias dimensiones. Por un lado, desde los

sentidos construidos y reforzados en torno al concepto de víctima que se instauran como discursos

para entenderla, atenderla y asistirla, que pueden responder a modelos de desarrollo concretos.

Desde la postura teórica asumida en esta investigación, estos se entienden como elementos

estructurales que funcionan como reglas y determinan algunas prácticas cotidianas de las víctimas

(Giddens, 2011). Por otro lado, a partir de la comprensión de que el acceso a derechos,

humano se apropia “a través del lenguaje, la comunicación o la tradición”. Adicionalmente, el sujeto va construyendo nuevos

sentidos del mundo de la vida a medida que lo experimenta.

Page 15: SENTIDOS DE LA VICTIMIZACIÓN Y AGENCIA DE LAS VÍCTIMAS

12

oportunidades y libertades (Sen, 2000) (como el acceso al mercado laboral, a la productividad y al

campo del emprendimiento), derivado de estos procesos, son recursos estructurales (Giddens,

2011), que pueden posibilitar la ampliación y el ejercicio de la capacidad de agencia de las víctimas

y generar transformaciones tanto en su vida cotidiana como en las condiciones de vulnerabilidad

y los problemas de desarrollo que experimentan.

En este contexto, se retoma el concepto de agencia desde lo propuesto por Amartya Sen (2000) y

Anthony Giddens (2011), y algunos elementos de la teoría de la estructuración, para explorar esta

relación con la intención de que pueda constituirse en un insumo para las administraciones locales

y generar así propuestas para implementar procesos más integrales para las víctimas.

En esa medida , los resultados de este proceso de investigación pueden generar conocimiento sobre

nuevas maneras de enfocar y orientar los proyectos de Autonomía Económica para las víctimas

del conflicto armado de la ciudad, recuperando su voz y rescatando sus miradas sobre los proyectos

de restablecimiento ofrecidos por la insitucionalidad; además, es pertinente en función de

cuestionar el modelo de desarrollo, bajo el cual se han orientado los mismos en el ámbito local y

nacional.

Page 16: SENTIDOS DE LA VICTIMIZACIÓN Y AGENCIA DE LAS VÍCTIMAS

13

2. MARCO CONCEPTUAL

2.1.Sentidos construidos de la victimización

Plantear la existencia de un único sentido de la victimización es tan arriesgado como tratar de

definir esta “categoría” sin caer en la trampa de otorgarle un carácter estático que deje de lado las

amplias dimensiones de la misma. No obstante, diversas disciplinas e incluso organismos

internacionales y nacionales se han dado a la tarea de lanzar definiciones del concepto que son

funcionales a cada contexto o mirada de la realidad (política, jurídica, comunitaria o psicosocial)

y de acuerdo con las necesidades que se encuentran de atención de estos sujetos (Rodríguez, 2008).

En este contexto, se han fijado determinados sentidos y significados que abordan el tema desde

múltiples aristas, pero siempre confluyen en el debate sobre las implicaciones de definir a la

víctima de la violencia puesto que esto lleva en sí mismo una paradoja o dualidad. Por un lado, de

acuerdo a lo planteado por Rodríguez (2008), existen posturas que cuestionan el uso del concepto

de víctima por considerar que llevan al sujeto a ser apreciado desde posiciones de lástima y

conmiseración, y en tal caso a ser visto como un ser pasivo con necesidad de protección y ayuda.

Por otro lado, se considera que la definición de la víctima contribuye a su visibilización,

reconocimiento y al pleno uso de sus derechos civiles (Rodríguez, 2008). En esta doble mirada del

concepto se enmarcan los sentidos de la victimización que se han construido, los cuales construyen

realidades y fijan maneras de actuar o no en el mundo, pues el lenguaje tiene esta cualidad

performativa de crear, transformar e instituir realidades (Langshaw, 1955).

2.1.1. ¿La víctima como sujeto sacrificado o como ciudadano con derechos? Algunas

consideraciones en torno al concepto.

Para algunos autores, el origen del término “víctima” y su significado etimológico fue importado

directamente del campo de la religión, y aunque con el paso del tiempo ha sufrido un proceso de

secularización, quizás uno de los discursos que más ha contribuido a fijar una imagen de la víctima

como un individuo sufriente y sacrificado ha sido este (Marín, 2012). Puede decirse que esta

definición de la víctima ha sido tan determinante que ha permeado no sólo gran parte de los

discursos ajenos a la religión, sino que ha incidido en otras nociones más secularizadas del mismo.

Tal es el caso de las visiones construidas desde el ámbito jurídico, donde si bien se realiza un

esfuerzo por romper con esta concepción, las definiciones terminan apuntando a lo mismo: “(1) la

Page 17: SENTIDOS DE LA VICTIMIZACIÓN Y AGENCIA DE LAS VÍCTIMAS

14

afectación, tanto en el plano individual o colectivo, determinada por factores de origen físico,

psíquico, económico, político o social, así como del ambiente natural o técnico; (2) el sufrimiento

resultado de un designio, incidental o accidental; (3) el sufrimiento de manera injusta” (Marín,

2012, s.p).

Esta mirada de la víctima como un sujeto sacrificado ha motivado diferentes posturas. Autores

como Hartog (2012), rescatan esta visión por considerar que pone a la víctima en el plano del

heroísmo y donde se instala “una religión civil del sacrificio” (p.13) como una “escuela de

servidumbre voluntaria”, donde la víctima más que ser que ser un sujeto pasivamente sacrificado,

es un héroe activo que asume esta postura por el bienestar de otros. Según dicho autor, esta es la

víctima antigua que se opone sustancialmente de la víctima moderna que se instaura a partir de

1945, y se refiere a aquellos muertos, desplazados, desaparecidos y sobrevivientes que

inocentemente sufrieron daños y a los que “a nadie les pidió su opinión” (p.13). Del

reconocimiento de la víctima moderna, que se da entre otras cosas por el reconocimiento de los

crímenes de lesa humanidad, se deriva el acto de conmemorar y con este de prácticas traducidas

en políticas como el patrimonio, la memoria y la identidad. Hartog (2012) es entonces crítico frente

a esta postura de la víctima “pasiva” moderna que se conmemora, pues desde su punto de vista

“Conmemorar es una cosa, exigir una reparación es otra” (p.14).

En una perspectiva diferente, existen posturas que plantean que el reconocimiento por parte de los

países de la importancia de no olvidar los hechos de violencia y la vulneración de los derechos de

los pueblos extrayendo de ellos, como lo expresa Torodov (1997) un “valor ejemplar”, ha perfilado

a la víctima como un sujeto visible, portador de una voz, cuyos relatos, narrativas e interpretaciones

del pasado construyen una versión de los hechos que favorece la verdad y posibilita la

implementación de mecanismos de justicia transicional. En este punto también adquiere un papel

central el discurso como una manera de fijar a la víctima en este caso como un sujeto visible, que

trae consigo una historia y que cuenta con una legitimidad de la palabra (Jelin, 2001).

Estas visiones aunque pueden parecer contradictorias, ponen en evidencia la necesidad latente de

que la víctima se signifique como un sujeto con potencial de acción que exige reparación y que

cuenta con legitimidad de la palabra. En este contexto, el reconocimiento de la víctima no debe

servir para efectos de “compadecer”, sino para efectos de exigir. De ahí que, como lo plantea De

Greiff (2011), en la misma línea de lo argumentado por Hartog (2012), la declaración del estatus

Page 18: SENTIDOS DE LA VICTIMIZACIÓN Y AGENCIA DE LAS VÍCTIMAS

15

o categoría de víctima tiene un propósito que va más allá de reconocer los abusos, reversar y dar

espacio público a sus historias, y es el de reconocer su estatus de ciudadanos. El reconocimiento

de las víctimas como ciudadanos, implica una construcción de la víctima de sujeto de derechos

(Fuentes y Atehortúa, 2015), que puede sentar las bases para su accionar como agentes que además

de ser conmemorados, puedan gozar efectivamente de sus derechos. En este sentido, el

reconocimiento de la víctima desde su vulnerabilidad podría facilitar procesos de agencia si se

asume desde lo planteado por Butler (2006), al considerar que reconocer la vulnerabilidad humana

permite asumir una responsabilidad por la vida física propia y la de otros. Desde esta lógica, solo

un sujeto que reconoce su vulnerabilidad tiene capacidad de acción y de resistencia.

No obstante, en este proceso se puede correr el riesgo de caer en esencialismos donde la condición

de víctima se convierta en el elemento más determinante de su vida. Esta visión es defendida por

Montenegro y Piper (2009), quienes argumentan que la categoría de víctima se ha modelado a

través del lenguaje, configurando una identidad y un estatus determinado por las marcas del

pasado, que abarcan toda la vida del individuo que ha visto vulnerados sus derechos en contextos

de violencia política. Las autoras denominan este fenómeno como la “retórica de la marca” la cual

“produce por esta vía la categoría de víctima: (…) Se trata de un sujeto traumatizado en el proceso

de violencia que lo transformó en víctima” (p. 43).

Si bien desde la perspectiva de estas autoras, la identidad de víctima política ha posibilitado la

emergencia de movimientos sociales identitarios, ha sido un medio contundente para facilitar

procesos de reconciliación y ha facilitado el acceso de las mismas a los mecanismos de reparación;

este estatus ha creado una postura esencialista que limita otras formas de acción política

indispensables en los procesos de reconciliación, refuerzan al sujeto como víctima y lo marcan a

partir de la distinción con los demás. La identidad de víctima de la violencia determina entonces

todos los espacios de la vida y la subjetividad del individuo y el lugar que ocupaba antes de la

victimización cambia radicalmente para estar acorde con este nuevo rol que cumple en la sociedad

(Montenegro y Piper, 2009).

Con una visión similar, pero rescatando el papel de las víctimas como sujetos con capacidad de

decisión, Truñó (2010) alude a la categoría de “esencialismo estratégico”, donde las víctimas

asumen ese rol apelando a ciertas características de esta condición y “habitando el lugar de

víctimas” para generar así prácticas transformadoras. De esta manera, plantea que aunque habitar

Page 19: SENTIDOS DE LA VICTIMIZACIÓN Y AGENCIA DE LAS VÍCTIMAS

16

el lugar de víctima no es cómodo, el uso estratégico de la condición de víctima puede ser eficaz

para resolver situaciones cotidianas, acceder a derechos o identificarse con otros en su experiencia.

Este último punto es importante y ha incentivado perspectivas que abogan por la construcción de

sentidos de la victimización que consideren dimensiones individuales y colectivas de la categoría.

La víctima vista desde una dimensión individual es aquella a quien se le reconocen los daños

sufridos y que puede como individuo acceder a medidas de justicia que garanticen el

restablecimiento de sus derechos (CMH, 2009). Por esta razón, la perspectiva jurídica es la que

más apunta a la idea de una víctima desde la dimensión individual. Sin embargo, tal y como lo

plantea el CMH (2009), si bien esta mirada jurídica es necesaria y válida en función del acceso a

la justicia, es importante que se trascienda y se conciba a la misma desde su dimensión colectiva,

pues se corre el riesgo de que se privilegie una mirada individualizada de la historia, donde el daño

se particulariza despojándolo de un contexto y de una mirada colectiva que le da sentido.

De esta manera, más que señalar que la dimensión individual es negativa y que la dimensión

colectiva es positiva, lo que busca la diferenciación del término es mostrar la necesidad de que la

víctima no sólo acceda a los mecanismos de justicia como individuo aislado, sino que se empiece

a reconocer al Otro en la experiencia, lo cual la llevará a concebirse como un sujeto con capacidad

de acción en la escena pública y permitirá la implementación de otros procesos colectivos.

2.1.2. Sentidos hegemónicos de la victimización

Una perspectiva importante para comprender el proceso de construcción de sentidos sobre la

victimización, es entender que la categoría de víctima es parte y producto del discurso de los

Derechos Humanos y que, como lo afirman Gómez (2016) y Truñó, 2010), este discurso se ha ido

convirtiendo en dominante y hegemónico. Cabe destacar el significado que la Asamblea General

de las Naciones Unidas le otorga al concepto de víctima en la Resolución (60/147) “Principios y

directrices básicos sobre el derecho de las víctimas de violaciones manifiestas de las normas

internacionales de derechos humanos y de violaciones graves del derecho internacional

humanitario a interponer recursos y obtener reparaciones” donde el concepto adquiere un carácter

colectivo (Truñó, 2010):

“Se entenderá por víctima a toda persona que haya sufrido daños, individual o colectivamente,

incluidas lesiones físicas o mentales, sufrimiento emocional, pérdidas económicas o menoscabo

Page 20: SENTIDOS DE LA VICTIMIZACIÓN Y AGENCIA DE LAS VÍCTIMAS

17

sustancial de sus derechos fundamentales, como consecuencia de acciones u omisiones que

constituyan una violación manifiesta de las normas internacionales de derechos humanos o una

violación grave del derecho internacional humanitario. Cuando corresponda, y en conformidad con

el derecho interno, el término víctima también comprenderá a la familia inmediata o las personas a

cargo de la víctima directa y a las personas que hayan sufrido daños al intervenir para prestar

asistencia a víctimas en peligro o para impedir la victimización.” (NU, 2005, art.8).

La justicia transicional, un modelo que se nutre del discurso de los derechos humanos y de la

noción de víctima que éste promueve, se ha convertido en las últimas décadas en el mecanismo

“ideal” para transitar de la guerra a la paz en contextos conflictivos. Según lo argumenta Gómez

(2016), la justicia transicional hegemónica se ha convertido en una forma de gobernabilidad global

que promueve la aplicación de ciertas medidas de justicia y de materialización de los derechos de

las víctimas como la manera “correcta” y “civilizada” de dirimir los conflictos, y como la receta

exitosa para que los países “subdesarrollados” avancen en la senda del desarrollo. Según esta

autora, en países como Colombia estas medidas se aplican sin abordar y resolver las causas

estructurales que generaron los conflictos, de esta manera, la reconciliación termina por ser una

imposición, la verdad una herramienta sin potencial de transformación y la reparación una

transacción económica que termina por “monetarizar” los derechos de los sujetos victimizados.

En este contexto, la reparación puede terminar generando y afianzando procesos de desarrollo que

no necesariamente aportan en función de producir cambios cotidianos9 ya que al estar muy

centradas en lógicas económicas, no aportan de manera contundente en el desarrollo de múltiples

capacidades de estos sujetos. En este escenario, la reparación no se distingue de la simple “ayuda”

y termina por carecer de trasfondo moral y político, despojando a la víctima de su condición de

sujeto de derechos (Roht y Orlovsky, 2009). En este sentido, Roht y Orlovsky (2009) son críticos

al considerar que esta es:

“Una categoría limitada de respuesta al daño y se refiere generalmente a violaciones de derechos

civiles y políticos esenciales, tales como masacres o desapariciones, en lugar de temas más amplios

de exclusión social o negación de derechos económicos, sociales o culturales (…). Con esto no se

9 Cambios traducidos en el mejoramiento de condiciones económicas, en la superación de las desigualdades económicas y sociales,

en la superación de condiciones de vulnerabilidad, en el mejoramiento de sus viviendas, en el goce efectivo de los derechos,

incluidos los derechos a la verdad, la justicia, la reparación y las garantías de no repetición, en mayores posibilidades de

participación social y política; además, cambios en condiciones relacionadas con estados del ser como la posibilidad de sentirse

productivo, satisfecho, pleno, feliz, entre otros y, finalmente, cambios en las relaciones e interacciones sociales próximas.

Page 21: SENTIDOS DE LA VICTIMIZACIÓN Y AGENCIA DE LAS VÍCTIMAS

18

quiere decir que las reparaciones por violaciones de derechos económicos, sociales y culturales no

sean posibles sino, simplemente, que a la fecha ningún programa presentado bajo título de reparación

ha intentado atender a tales violaciones cuando no ha habido la concurrencia de violaciones de

derechos civiles y políticos básicos” (p.525).

De esta manera, los programas de reparación, tanto en Colombia como en otros escenarios, se han

quedado cortos en función de atender problemas como la desigualdad, la pobreza o la exclusión,

que han sido los principales generadores de conflicto; promoviendo “estados de cosas similares”

en las “transiciones” (Gómez, 2016, p. 142) y minando el potencial de transformación de las

sociedades. Este elemento crítico es importante en aras de pensar en los términos bajo los cuales

los proyectos analizados plantean la atención y asistencia de los sujetos víctimas que participan en

el mismo, y su intención y capacidad para abordar los problemas estructurales y las condiciones

de precariedad en las que han vivido las mismas de manera previa a la victimización.

2.2.Víctimas y desarrollo humano: el sujeto víctima como agente del desarrollo

En su sentido más simple, puede entenderse que el desarrollo humano es un proceso de expansión

de las libertades humanas, de sus capacidades, opciones y oportunidades. Tal y como lo argumenta

el PNUD (s.f) “las oportunidades esenciales que las personas valoran en gran medida van desde

las oportunidades políticas, económicas y sociales de ser creativos y productivos hasta el goce del

respeto propio, el empoderamiento y el sentido de pertenencia a una comunidad” (párr.18). A partir

de esta claridad, los proyectos objeto de este análisis serán entendidos como medios y fines para

la expansión de las capacidades de las víctimas y de sus libertades.

Tal y como lo argumenta Sen (2000), las libertades humanas se dividen en cinco categorías: 1)

libertades políticas que comprenden las oportunidades de los sujetos de participar, incidir en

decisiones políticas y de gozar de sus derechos; 2) servicios económicos, entendidos como

oportunidades de “producir, consumir o realizar intercambios” (p. 58); 3) oportunidades sociales

entendidas como la posibilidad de acceso a aquellos sistemas que le permiten a los sujetos vivir

mejor en su vida privada y pública, entre ellos se encuentran los sistemas de salud, educación,

entre otros; 4) las garantías de transparencia que involucran la libertad para acceder a la

información clara y franca y 5) la seguridad protectora, como una red de protección social que

comprende mecanismos institucionales para proteger y dar solución a problemas de vulnerabilidad

presentes en una sociedad.

Page 22: SENTIDOS DE LA VICTIMIZACIÓN Y AGENCIA DE LAS VÍCTIMAS

19

Considerando lo anterior, la victimización puede entenderse como un proceso de negación de

libertades humanas, toda vez que la vulneración de un tipo de libertad puede acarrear la negación

de otros tipos de ellas. En este contexto los argumentos de De Greiff (2009) pueden tener sentido:

“Las atrocidades masivas se constituyen en una afrenta y conducen a la disminución de las

capacidades [humanas]” (p.50). En este sentido, podría considerarse que la vulneración de los

derechos humanos y los derechos fundamentales que involucra el acto de la victimización, son

impedimentos para el desarrollo humano. De ahí la importancia de garantizar libertades políticas

y goce efectivo de derechos como una manera de asegurar el libre desarrollo de las capacidades

de los sujetos víctimas: “Los derechos humanos y el desarrollo comparten una visión y un

propósito común: asegurar la dignidad y la libertad de las personas en todas partes” (p.50).

Por su parte, el restablecimiento de derechos es entendido aquí como un medio o escenario para la

generación y ampliación de las libertades de los sujetos que han sido victimizados. Por lo tanto,

esta debe ser un proceso integral que involucre diversas dimensiones, aunque se oriente con

intencionalidades concretas. De esta manera, si bien pueden existir políticas que abogan por la

ampliación de la capacidad productiva y por ende de la autonomía económica de los sujetos

víctimas, en la práctica la expansión de esta libertad económica debe posibilitar la generación o

ampliación de otros tipos de libertades.

Esto podría posibilitar que la asistencia de las víctimas, tal y como han sido pensadas en el marco

de los proyectos analizados, trascendieran a una dimensión más procesual (Roht y Orlovsky, 2009)

e integral que permita construcción del sujeto víctima como agente del desarrollo, en la medida en

que experimenta la ampliación de sus libertades económicas y sociales como un proceso que ocurre

a la par de la ampliación de otras libertades. Sin embargo, esto no quiere decir que la reparación,

por contar con estas características, sea el escenario ideal para que ello ocurra, pues como ya ha

sido afirmado, en contextos como el colombiano se ha limitado al plano de la “monetarización”

(Gómez, 2016), quedándose corta en atacar otros problemas estructurales. De igual manera, el

desarrollo no debe reducirse al plano de lo económico pues “su objetivo central debe ser el ser

humano” (PNUD, 1990, p. 34) y en esta medida debe sincronizarse con los objetivos de los

Page 23: SENTIDOS DE LA VICTIMIZACIÓN Y AGENCIA DE LAS VÍCTIMAS

20

programas pensados para las víctimas, de tal manera que puedan ser más eficaces en la labor de

construir al sujeto víctima como agente del desarrollo10.

La agencia,11 definida como “la capacidad de una persona para actuar y provocar cambios y cuyos

logros pueden justificarse en función de sus propios valores y objetivos” (Sen, 2000, p.35),

adquiere total relevancia en este contexto. Cabe destacar que la agencia junto con los conceptos

de capacidades y libertades, se instauraron como parte del constructo del desarrollo humano, teoría

desarrollada por Amartya Sen, que cuestiona las mirada del desarrollo limitada al campo de lo

económico, donde el bienestar humano está supeditado a los dictámenes de la economía. Sin

embargo, más allá de ello, para este autor las personas no deben considerarse simples receptores

de los programas económicos y sociales, sino como agentes de cambio con un rol activo (Fukuda-

Parr (2003), retomando a Sen (2000). Esta consideración sustenta la idea de que los proyectos

analizados como programas con fines de restablecimiento social y económico, deberían favorecer

la construcción de sujetos víctimas con roles activos dentro de su desarrollo, más que como simples

beneficiarios de los mismos. En este escenario, la agencia puede constituirse en una práctica de

poder en la medida en que expresa la capacidad para obrar del sujeto que produce un efecto o

transformación en su propia vida y en relación con otros.

Esta noción de la agencia como poder es desarrollada por Giddens (2011) quien considera que “ser

un agente es ser capaz de desplegar (repetidamente, en el fluir de la vida diaria) un espectro de

poderes causales, incluido el poder de influir sobre el desplegado por otros” (p.51). Para el autor,

en la práctica de la agencia intervienen diversos elementos: la racionalización de la acción, que

está asociada con la comprensión teórica que tienen los individuos de su actividad, el registro

reflexivo de su actividad y la motivación o intención de la acción. La acción de un agente, desde

10 Esta propuesta puede verse reflejada en las aproximaciones sobre la “reparación transformadora”, como una propuesta que busca

ir más allá en el camino de reparar a las víctimas y de ofrecer condiciones para generar reales transformaciones sociales (Uprimny

y Saffon (2009). 11 El concepto de agencia nos remite a las discusiones sobre el rol del sujeto como actor en el marco de condicionamientos

estructurales. Autores como Giddens (2011) y Bourdieu (2007) han avanzado en comprensiones más relacionales de esta dicotomía,

otorgándole al sujeto el poder y la capacidad de construir y no registrar pasivamente el mundo social. En una línea similar, Touraine

(1998) realiza un rescate del sujeto como un actor que reconoce al otro en su diversidad y que puede ser considerado un colectivo

o grupo social. El concepto de agencia entra a ser parte del lenguaje del empoderamiento y empieza a ser dotado de características

como la autodeterminación, la orientación por razón, la acción y el impacto sobre el mundo (Crocker & Robeyns, 2009) y a

relacionarse con condiciones como la capacidad, el poder efectivo, las metas y las responsabilidades ((Alkire, 2009). Los

desarrollos de Sen (2000), se enmarcan dentro de esta línea considerando la agencia como una libertad y camino para el desarrollo

de otras libertades en un marco de oportunidades ampliadas a través de la acción del Estado.

Page 24: SENTIDOS DE LA VICTIMIZACIÓN Y AGENCIA DE LAS VÍCTIMAS

21

la perspectiva de Giddens (2011), se entiende como una práctica “situada” en el tiempo y en el

espacio, a través de la cual el mismo reproduce la estructura.

Por su parte, el concepto de estructura en Giddens, obedece a un debate clásico en la sociología

que ha estado presente en la corriente funcionalista, donde la estructura es externa a los individuos

y las instituciones son entendidas como las garantes del constreñimiento moral de los mismos en

las sociedades modernas; además, considera las ideas de la corriente estructuralista, desde las

cuales la estructura se asimila a través códigos que tienen significados sociales y simbólicos

soterrados.

Giddens (2011) establece una relectura de estas corrientes de pensamiento que no asimilan a los

individuos como capaces de realizar grandes transformaciones estructurales y plantea una postura

de encuentro en la que el concepto de “estructura” se entiende como las “reglas y recursos o

conjuntos de relaciones de transformación que se organizan como propiedades de sistemas

sociales” (p.63). Según Giddens (2011), si bien la estructura está por fuera del tiempo y del espacio

y se caracteriza por la ausencia del sujeto, esta se encuentra inserta en sistemas sociales atravesados

por el tiempo y el espacio donde “hay actividades situadas de agentes humanos” (p.63). Por su

parte, los sistemas sociales se definen como las “relaciones reproducidas entre actores o

colectividades, organizadas como prácticas sociales regulares” (p.63)

De esa manera, la estructura está implícita dentro de los sistemas sociales y por lo tanto “la

constitución de agentes y la de estructura no son dos conjuntos de fenómenos dados

independientemente, no forman un dualismo sino que representan una dualidad”12 (p.63). De esta

manera la estructura aunque plantea marcos de acción predeterminados que habilitan canales para

que el sujeto la produzca y reproduzca, también abre espacio para que se generen prácticas

transformadoras. El sujeto víctima como agente, aunque se ve constreñido por la estructura a través

de reglas constitutivas y reguladoras “como técnicas o procedimientos generalizables que se

aplican a la reproducción de prácticas sociales” (p.25), también se ve habilitado a través de

recursos “como medios a través de los cuales se ejerce poder” (p.24) para reproducir la estructura

12 Giddens (2011) considera que agencia y estructura no son fenómenos independientes. Desde su perspectiva, la constitución de

agentes y de estructura no se da como un proceso de antagonismos sino como un proceso dual donde estos dos fenómenos a pesar

de ser distintos convergen en la estructura misma. En este sentido, la estructura tiene un carácter dual: es constrictiva y habilitante.

De esta manera, el autor se aparta de la idea de dualismo porque no concibe la constitución de ambos fenómenos de manera

independiente y se aleja de posturas como las provenientes de las corrientes clásicas de la sociología, donde ambos elementos son

considerados como escenarios opuestos y antagónicos.

Page 25: SENTIDOS DE LA VICTIMIZACIÓN Y AGENCIA DE LAS VÍCTIMAS

22

y generar transformaciones en el marco que la misma le ofrece (Giddens, 2011). En este sentido,

la estructura cumple una doble función, “es constrictiva y habilitante” (Giddens, 2011, p. 29).

En este punto puede apreciarse con mayor claridad un encuentro entre los postulados del desarrollo

humano y los de Giddens, pues en ambos casos se le otorga un poder al sujeto para generar

transformaciones dentro de los marcos de acción o libertades que se le ofrecen. Esta mirada

pretende ser profundizada en este estudio de caso, donde se considera que los proyectos analizados

al ampliar las libertades, pueden ofrecer marcos de acción a los sujetos víctimas para actuar y

generar prácticas de poder. Además se entiende que los proyectos en mención funcionan como

elementos estructurales que pueden expresar la dualidad de la estructura, pero que no se

constituyen en la estructura en sí misma, ya que la estructura, como lo afirma Giddens (2011) no

tiene presencia espacio temporal y existe como huella “mnémica” que orienta las acciones

humanas, mientras que la acción de los proyectos nace de prácticas institucionalizadas donde

intervienen diversos actores, que pueden reproducir rasgos o propiedades estructurales de sistemas

sociales y se encuentran situadas en el espacio y en el tiempo.

El poder desplegado mediante la agencia cuenta con diferentes dimensiones asociadas a prácticas

sociales estratégicas que tienen efecto en la temporalidad y la espacialidad. Autoras como Ruth

Lister (2003, 2004) citada por Coulthard (2012), entienden este fenómeno muy ligado a la relación

entre estructura y agencia planteada por Giddens (2011), al considerar que la agencia puede

desarrollarse de manera estratégica en diferentes escenarios y momentos, así: 1) Agencia cotidiana,

referida a la toma de decisiones diarias. 2) Agencia estratégica, que tiene que ver con la toma de

decisiones en torno a estrategias a más largo plazo. 3) Agencia personal, como reflejo de las

decisiones propias del individuo y 4) Agencia política y ciudadana, que tiene que ver con la

capacidad del sujeto de producir cambios más amplios.

En este sentido, el presente proyecto entiende que la estructura prefija sentidos de la victimización

que, como bien lo afirma Gómez (2015), pueden ir desde visiones estereotipadas y hegemónicas

de las víctimas, a sentidos colectivos que determinan sus maneras de actuar. Estos se constituyen

en escenarios de disputa que llevan a las víctimas a construirse y pensarse incluso de formas contra

hegemónicas. Así, los proyectos productivos analizados si bien pueden asimilarse como elementos

estructurales que contribuyen en la reproducción de sentidos de la victimización concretos y

hábitos asociados a la misma, también deben considerarse recursos de la estructura (Giddens,

Page 26: SENTIDOS DE LA VICTIMIZACIÓN Y AGENCIA DE LAS VÍCTIMAS

23

2011) o escenarios de ampliación de libertades (Sen, 2000) que pueden habilitar canales para que

las víctimas puedan agenciar cambios a través de su práctica. Desde este punto de vista, estos son

una expresión de la “dualidad de la estructura” (Giddens, 2011).

Por su parte, la agencia de las víctimas puede constituirse en una práctica de poder situada

(cotidiana, personal, estratégica y política que puede llegar a ser contra hegemónica) que

contempla múltiples aspectos (transformación, constitución de nuevos sentidos, hábitos o

comportamientos esperados y adaptación) y puede generar nuevos marcos de acción del sujeto

víctima. En conclusión, el desarrollo humano no se entiende aquí sólo como la ampliación de

libertades, capacidades y oportunidades de las víctimas, sino también como un escenario para la

construcción de sentidos sobre la victimización que amplían las posibilidades de actuación de los

sujetos víctimas en el espacio y en el tiempo y en el plano de lo individual y lo colectivo. El

siguiente gráfico relaciona los conceptos que se han tenido en cuenta para el desarrollo de esta

investigación, dejando por sentado la vía a través de la cual se entiende que los proyectos objeto

de análisis construyen al sujeto víctima como agente del desarrollo humano:

Page 27: SENTIDOS DE LA VICTIMIZACIÓN Y AGENCIA DE LAS VÍCTIMAS

24

3. MARCO METODOLÓGICO

“Un caso no puede representar el mundo, pero sí puede representar un mundo en el cual muchos casos se sienten reflejados. Un caso y la narración que lo sostiene, no constituyen una voz individual encapsulada en sí misma, sino que, antes al contrario, una voz puede, nos atrevemos

a afirmar, en un instante determinado, condensar los anhelos y las tensiones de muchas voces silenciadas”

R.E Stake

La presente investigación se llevó a cabo desde un enfoque cualitativo que trabaja con las palabras

de las personas, ya sean habladas o escritas y con la conducta observable (Bodgan y Taylor, 1992).

Además, se adoptó como metodología de investigación el estudio de caso que es definido por Yin

(1994) como “una investigación empírica que estudia un fenómeno contemporáneo dentro de su

contexto (...) Una investigación de estudio de caso trata exitosamente con una situación

técnicamente distintiva en la cual hay muchas más variables de interés que datos observacionales;

y, como resultado, se basa en múltiples fuentes de evidencia” (p. 13).

En este sentido, se buscó realizar un estudio de caso interpretativo13 que permitiera una mayor

comprensión del caso analizado, es decir, de los proyectos de Fortalecimiento a UP y la Estrategia

de Comercialización de la Alcaldía de Medellín y las víctimas que han sido foco de los mismos.

Uno de los factores que me llevó a determinar la importancia de este caso como un proceso

susceptible de análisis, fue considerar su relación directa con el desarrollo de las capacidades de

los sujetos víctimas, conclusión a la que se llegó a través de la experiencia de trabajo con algunos

programas pensados para las víctimas de la ciudad, tales como la Consulta Ciudadana e

Institucional para la construcción de la Casa de la Memoria de Medellín y la sistematización de

las experiencias de Retorno a Oriente y de la Alianza Medellín San Carlos, desarrolladas por la

Corporación Región para el Centro Nacional de Memoria Histórica (CMH).

A partir de mi participación en este último proyecto pude conocer la Estrategia “Crisálidas,

Emprendiendo Sueños”, la cual tuvo sus orígenes en el Programa de Retornos de la Alcaldía de

Medellín. El conocimiento inicial sobre dicha Estrategia me permitió formular algunas preguntas

referidas a los aportes reales de los procesos institucionales en la ampliación de las capacidades de

13 Se plantea como un estudio de caso interpretativo porque va más allá de la labor de estudiar un fenómeno dentro de su contexto,

para interpretarlo como una realidad compleja: “Se centra en la individualidad como una conquista creativa, discursivamente

estructurada, históricamente contextualizada y socialmente producida, reproducida y transmitida. Al centrarse en la particularidad,

pretende construir un saber en torno a ella, al tiempo que reconoce en la singularidad una perspectiva privilegiada para el

conocimiento de lo social” (Galeano, 2004, p.69).

Page 28: SENTIDOS DE LA VICTIMIZACIÓN Y AGENCIA DE LAS VÍCTIMAS

25

las víctimas, las cuales quise continuar explorando y se derivaron en los interrogantes que guiaron

la presente investigación.

Posteriormente, el acercamiento a la UMARV, me permitió conocer a funcionarios de esta

institución que operaban los proyectos. De ahí que la selección de las víctimas que fueron

entrevistadas, obedeció en gran parte a la voluntad de los funcionarios por facilitar contactos de

los que consideraban casos emblemáticos dentro del programa de Autonomía Económica de la

Unidad, lo que se articuló con algunos criterios de selección como garantizar diversidad en las UP

elegidas y el hecho de que llevaran un tiempo considerable de participación en los proyectos, sin

importar distinciones de género o edad (Ver anexo 1: Fases de la investigación).

Al interior de la investigación cualitativa se adoptó la fenomenología como paradigma, en vista de

que “estudia los fenómenos tal como son experimentados, vividos y percibidos por [la persona]”

(Martínez, 2002, p.167). Por esta razón, aunque se contó con un guion de entrevista, se partió de

la comprensión de que el mundo de la vida del sujeto víctima “tiene lugar sobre un fondo de sentido

con el que cada uno de nosotros contamos permanentemente sin hacerlo explícito, sin que esté

expresado o fijado de alguna manera” (Husserl, citado por Herrera, 2010, p.257), y se buscó

explorar en ese contexto de sentido expresado a través del lenguaje en el que discurre la experiencia

de las víctimas.

A través de una entrevista semiestructurada que contó con una guía diseñada (ver anexo 2: Guía

de entrevista sujeto víctima), pero que obedeció a una marcada inclinación por rescatar las

narrativas de las víctimas, se recurrió al registro reflexivo14 de la práctica de seis de ellas15, las

cuales fueron referenciadas por el programa de Autonomía Económica de la UMARV de la ciudad

de Medellín. Particularmente, la gran mayoría de participantes referenciadas por la Unidad fueron

mujeres cabeza de hogar con un rango de edad entre los cuarenta y cincuenta años, población que

para la fecha se constituía en el grueso de participantes de este programa.

14 La categoría de registro reflexivo se retoma de las conceptualizaciones de Giddens (2011) según las cuales los agentes registran

sus prácticas cotidianas y los contextos en que estas se desenvuelven: “Es decir que los actores no solo registran de continuo el

fluir de sus actividades y esperan que otros, por su parte, hagan lo mismo; también registran por rutina aspectos sociales y físicos

de los contextos en los que se mueven” (p. 19). 15 Se llevaron a cabo un total de seis entrevistas obedeciendo al criterio de saturación de la información, donde al contar con seis

narraciones lo suficientemente profundas y con información relevante, la investigadora pudo tomar la decisión de suspender la

recolección de la información por considerar que existía una saturación de la misma, es decir, que existía información recurrente y

considerable sobre la forma en que los sujetos de la investigación describían la ejecución de los proyectos analizados, una renuente

alusión a la “ayuda” como una categoría para explicar la implementación de los procesos institucionales pensados para las víctimas

y una reiterada mención del tema del emprendimiento y los negocios.

Page 29: SENTIDOS DE LA VICTIMIZACIÓN Y AGENCIA DE LAS VÍCTIMAS

26

Dentro de los emprendimientos o UP fortalecidas y comercializadas, se encontraron tres de

gastronomía y culinaria, una microempresa de confecciones y distribución de uniformes para el

área de la salud, un estudio de producción musical y una unidad productiva dedicada a la

elaboración y comercialización de artesanías. Este proceso metodológico involucró un

acercamiento inicial para la generación de confianza y reconocimiento de la UP de los sujetos de

la investigación, y posteriormente, un nuevo acercamiento más profundo donde se abrió el espacio

para el diálogo.

Este estudio planteó grandes dilemas éticos por las características de la población que fue

entrevistada, ya que la narración de sus experiencias, en muchos casos, revivió el dolor y generó

expresiones emocionales. Por esta razón, aunque para efectos de claridad de la investigadora, se

estableció un guion de preguntas extenso, en la práctica estos sólo fueron ejes orientadores de una

conversación en donde los sujetos tuvieron la libertad para hablar de sus experiencias y de su

universo de sentido. Como lo afirma Guber (2005) “Esto no significa adoptar un enfoque ateórico,

sino evitar caer en el teoricismo estéril y en ciertas modalidades del sociocentrismo” (p.143) pues

“según la concepción positivista nos hemos acostumbrado a creer que para saber algo basta con

preguntar. La respuesta a una pregunta colmaría la ansiedad de conocimiento. Pero esto es sólo

parcialmente cierto, ya que supone que las preguntas formuladas por el investigador pertenecen al

mismo universo de sentido que las respuestas del informante” (p.134).

Sumado a lo anterior, esta investigación contó con un reto bastante importante que se ha puesto

en evidencia incluso en el plano de lo conceptual: no llevar a que a través del proceso se acentuaran

identidades sufrientes al formular preguntas álgidas que pudieran generar malestar en los sujetos

de la investigación. Además, fue necesario no invadir su privacidad, sino generar un espacio en el

cual las mismas se sintieran en absoluta confianza y tranquilidad para decidir sobre sus relatos.

Por esta razón, también, se solicitó la firma de un consentimiento informado que garantizaba a las

víctimas el uso de la información suministrada sólo con fines académicos y se aclaraba que sus

nombres son cambiados en el cuerpo del texto con el fin de generar una mayor confianza.

Por otro lado, este proceso involucró conocer el funcionamiento de estos proyectos a través de una

entrevista semiestructurada a la directora del programa de Autonomía Económica de la UMARV

(Ver anexo 3: Guía de entrevista a funcionarios públicos) y la Revisión de fuentes secundarias

Page 30: SENTIDOS DE LA VICTIMIZACIÓN Y AGENCIA DE LAS VÍCTIMAS

27

(Planes de Desarrollo, documentación del proyecto, informes y balances suministrados por la

Alcaldía de Medellín 2012-2015).

A partir de lo anterior, se procedió a la codificación y análisis de la información recolectada a

través del programa Atlas.ti7 Qualitative Data Analysis, teniendo como base un temario de

categorías construidas a partir del marco teórico (Ver anexo 4: Cuadro de categorías analíticas).

Page 31: SENTIDOS DE LA VICTIMIZACIÓN Y AGENCIA DE LAS VÍCTIMAS

28

4. RESULTADOS: LA VÍCTIMA COMO AGENTE DEL DESARROLLO

HUMANO: UN SUJETO QUE SE CONSTRUYE Y RESIGNIFICA EN LA

INTERACCIÓN DE LO HEGEMÓNICO Y LO COTIDIANO

4.1.Sujetos de la investigación y contexto de las iniciativas

Abordar un tema que involucra la comprensión de sentidos de la victimización y las prácticas de

agencia de las víctimas, implica rescatar las experiencias de vida de una población profundamente

golpeada por el fenómeno del conflicto armado presente en la ciudad16. Las historias de los sujetos

de la investigación son el reflejo de un universo de sentido que buscó ser comprendido a través del

presente estudio, que evidencian su particularidad y la manera en que el Estado y el modelo de

desarrollo bajo el cual opera se hace presente y visible en sus vidas para atenderlas y repararlas

(Ver anexo 5: Cuadro de trayectorias de las víctimas y Anexo 6: Cuadro de ruta metodológica de

los proyectos analizados).

Eugenia y Patricia son dos madres cabeza de familia mayores de 40 años que habitaban la comuna

trece de la ciudad de Medellín. Allí, debido a la agudización del conflicto armado intraurbano se

vieron obligadas a desplazarse a otros lugares de la ciudad por temor a la materialización de una

serie de amenazas de muerte contra sus hijos. Antes del desplazamiento, ambas trabajaban por el

sostenimiento de sus familias en temas como la confección de ropa y la venta de comidas, llegando

en determinado momento a formar microempresas familiares que les proveían recursos necesarios

para este propósito. Una vez se encontraron en su nuevo contexto, acudieron a redes de apoyo

próximas como la familia y las instituciones para ser acompañadas en estos procesos e iniciaron

la búsqueda de nuevas alternativas para el sostenimiento de sus hijos. En este devenir, Eugenia

empieza a desempeñarse como lideresa de víctimas en la ciudad, mientras que Patricia se inserta

en espacios de formación y capacitación como el SENA y comienza a participar de procesos de

emprendimiento como “Capital Semilla”. Estas dos mujeres empezaron a ser parte de los proyectos

de fortalecimiento a UP gracias a las redes de apoyo que fueron logrando a través de su

participación en otros espacios de formación y liderazgo. Sus actuales UP están asociadas con las

16 Tres de las víctimas entrevistadas lo fueron de grupos paramilitares existentes en el contexto de la ciudad; dos, aluden haberlo sido de grupos

guerrilleros que operaban en el contexto rural. Una de ellas no hizo mención explícita de su victimario, lo cual puede explicarse por la renuencia para detenerse con mayor profundidad en la experiencia de la victimización y detallar aspectos de la misma.

Page 32: SENTIDOS DE LA VICTIMIZACIÓN Y AGENCIA DE LAS VÍCTIMAS

29

labores que cumplían antes del desplazamiento, sin embargo, sólo una de ellas ha sido integrada a

la Estrategia Crisálidas.

Ana y Beatriz son dos mujeres mayores de sesenta años, ambas desplazadas del municipio de

Apartadó del departamento de Antioquia. En estos dos casos el desplazamiento significó la

desintegración familiar, ocasionando la separación de cónyuges, padres y hermanos. Con el paso

del tiempo, estas mujeres pudieron reunirse nuevamente con sus familiares y acceder a los

programas para las víctimas que existían en la ciudad. Sin embargo, esto sucedió mucho tiempo

después de la victimización ya que ninguna de las dos contó con los recursos ni la información

suficiente para interpretar el marco al que obedecía su desplazamiento. En el contexto del

desplazamiento, Ana tenía un restaurante y habitaba en una finca de su propiedad. Posteriormente,

buscó acceder a recursos económicos trabajando en casas de familia y en ventas informales de

alimentos. En ese trasegar, fue generando su propia marca de chocolates artesanales, iniciativa que

fue fortalecida mediante el proyecto de la UMARV. Beatriz, por su parte, inició su trayectoria

ocupacional en el lugar de acogida a través de ventas informales de dulces y comida en las afueras

de colegios e iglesias. Ambas son parte de la estrategia Crisálidas y asisten con frecuencia a ferias

para la comercialización de sus productos.

Silvia es una mujer de 35 años, víctima del desplazamiento forzado intraurbano, quien reside con

sus padres en un corregimiento de la ciudad de Medellín. Siendo muy joven se vio enfrentada a un

accidente que le ocasionó una condición de discapacidad. Desde este momento empezó por su

propia iniciativa a insertarse en los programas de la Alcaldía de Medellín para esta población,

pudiendo acceder a capacitaciones y a formación en labores artesanales y, posteriormente,

desempeñarse como educadora artística en proyectos sociales de esta institución. Como sucedió

en la mayoría de los casos aquí descritos, Silvia no se identificó como víctima en el momento

inmediatamente posterior a la victimización sino que lo hizo mucho después a partir de la

información que le iban suministrando en escenarios institucionales. En su búsqueda de los

programas existentes para la población en situación de discapacidad, logró conocer de primera

mano información sobre el proyecto de fortalecimiento a UP y de esta manera accedió a éste y a

la Estrategia Crisálidas, proceso a través del cual empezó a distribuir sus artesanías en cuero.

Andrés es un joven de 26 años que habitaba la comuna trece de la ciudad de Medellín. En este

contexto empezó a ser reconocido por hacer parte de un grupo de raperos de la ciudad y comenzó

Page 33: SENTIDOS DE LA VICTIMIZACIÓN Y AGENCIA DE LAS VÍCTIMAS

30

a participar de movimientos juveniles que promovían la formación de niños y niñas en artes

musicales. Sin embargo, debido a las denominadas “fronteras invisibles” y al conflicto existente

en las periferias urbanas de la ciudad de Medellín, empezó a ser blanco de amenazas junto con sus

compañeros de grupo, algunos de los cuales fueron asesinados. De esta manera, se vio obligado a

desplazarse de su barrio junto con sus compañeros y familiares. Su participación en corporaciones

de carácter musical lo llevó a conocer la oferta institucional para la población víctima y finalmente

a ser fortalecido con su grupo a través de un estudio de producción musical.

La ciudad de Medellín ha sido un caso particular entre muchos, pues se ha constituido en un

escenario puntual de acciones de grupos armado y de narcotráfico, además de ser la capital

departamental con mayor número de grupos armados en su interior (Giraldo, 2008, p.106).

Además, se considera el segundo escenario urbano en el país con mayor número de personas

víctimas del conflicto armado, lo cual ha hecho necesario que exista una infraestructura para la

atención de las mismas (Plan de Desarrollo municipal 2012-2015).

Por esta razón se ha desarrollado un modelo local de atención a las víctimas del conflicto armado

que comporta algunas diferencias con el modelo nacional pero reconoce la normatividad y

jurisprudencia vigente, entre ellas la Ley 1448 de 2011 que como discurso hegemónico en el país

(Truñó, 2013) permitió la definición y la comprensión del significado de víctima a nivel local y

determinó la forma en que la institucionalidad se organizó para atenderla (Alcaldía de Medellín,

2012).

El modelo se materializó de muchas formas. Una de ellas tuvo que ver con la existencia de una

organización especializada para la atención de las víctimas, esta es la Unidad Municipal de

Atención y Reparación a Víctimas (UMARV) creada en el año 2012. La UMARV abarca diversos

componentes, entre los que se incluye el de Restablecimiento, el cual cuenta con una línea de

Autonomía Económica que ha tenido la intención de fortalecer la capacidad de gestión empresarial

de las víctimas orientada a la generación de ingresos que permitan su incidencia en el desarrollo

local, contando para ello con los proyectos de Creación y Fortalecimiento a UP de las víctimas del

conflicto armado y de la Estrategia de Comercialización de estos productos a través de la marca

Crisálidas17 (Alcaldía de Medellín, 2013b).

17 La marca Crisálidas, Emprendiendo Sueños surge en el programa de Retornos y Reubicaciones de la UMARV de la ciudad de

Medellín. Su nombre hace alusión al proceso de desarrollo que experimenta el insecto hasta su forma adulta.

Page 34: SENTIDOS DE LA VICTIMIZACIÓN Y AGENCIA DE LAS VÍCTIMAS

31

Comprender que existe un modelo local de atención para las víctimas del conflicto armado en la

ciudad es importante en la medida en que permite vislumbrar que este responde a unas lógicas y

discursos que tienen que ver con la forma en que se ha concebido la atención y asistencia de las

víctimas e indagar en los modelos de desarrollo a los cuales responden, modelos que aportan de

manera definitiva en la construcción del sujeto víctima.

4.2.Sentidos de la victimización creados y reforzados: De la víctima como sujeto de

ayuda a la víctima estratega y emprendedora.

Partiendo de considerar que los proyectos objeto de este estudio son concebidos en el marco del

mismo como elementos estructurales que cumplen la doble función de constreñir18 y de ofrecer

recursos y libertades a la víctima; este apartado aborda el tema de los sentidos creados y reforzados

por los proyectos en mención, buscando aportar en la comprensión de los procesos de atención y

restablecimiento las víctimas generadas desde la institucionalidad, como un escenario donde se

promueven lógicas de Estado y de desarrollo.

Teniendo en cuenta lo anterior, quizás una de los primeros elementos que vale la pena resaltar a

partir de las entrevistas realizadas, es la constante mención de la palabra “ayuda” como parte del

vocabulario utilizado para referirse a la atención y a las políticas de restablecimiento estatales.

Alusión que va adquiriendo mayor fuerza y va evidenciando que esta es una interpretación

heredada de su interacción con los proyectos aquí estudiados y con otros procesos de los que las

mismas han podido participar en el marco de los programas pensados para las víctimas de la

ciudad.

De esta manera, una de las principales interpretaciones a las que permiten llegar las entrevistas, es

que a través del proceso de fortalecimiento a UP se generan y refuerzan sentidos de la

victimización que ponen a la víctima en el plano de sujeto de ayuda. Como una consecuencia

lógica, la atención recibida termina considerándose un acto de generosidad por parte del Estado y

no una responsabilidad del mismo para con ellas y el sujeto víctima se construye desde este

discurso a partir de visiones estereotipadas (Gómez, 2015) que la conciben desde posiciones de

necesidad y dependencia, más que como un sujeto con derechos.

18 En el marco del presente ejercicio investigativo se entiende que el constreñimiento no es una función necesariamente consciente

de los proyectos analizados, sino que es una consecuencia no esperada de la manera en que opera la misma institucionalidad. La

función de constreñir es una de las dimensiones de la estructura, este constreñimiento ocurre a través de reglas (Giddens, 2011)

Page 35: SENTIDOS DE LA VICTIMIZACIÓN Y AGENCIA DE LAS VÍCTIMAS

32

Pero esta no es solo una consecuencia del marco institucional bajo el cual opera la atención de las

víctimas a nivel local, sino que también es producto de la puesta en marcha de un modelo de

desarrollo económico que permea estos procesos y pone en funcionamiento una misión para el

desarrollo del sujeto víctima, donde el restablecimiento no se piensa más allá de la garantía de

unos mínimos de subsistencia por parte del Estado:

“Y cuando se restablece nosotros miramos varias dimensiones: Que sean atendidas psicosocialmente,

cuando ellas lo requieran, se sabe que las 100 familias no requieren una atención psicosocial porque

ellos han asumido que ellos ya han sido capaces de asumir y retar estas situaciones pues de conflicto,

pero hay unas que si nos dicen: “necesito ser atendida psicosocialmente”; que hayan tenido la

reunificación; que tengan identificación de la libreta militar; que tengan la tarjeta de identidad, todos

los documentos de identidad; que mínimo estén estudiando, ósea que puedan terminar su primaria y

su bachillerato, mínimo hasta noveno pues es lo que exige la ley (…) En un 85% más o menos, las

UP que nosotros estamos fortaleciendo de esas familias es el único sustento económico que tienen

(…) y que posiblemente estas UP no puedan ser legalizadas a un corto plazo, como a veces se ha

querido, que esos negocio estén legalmente constituidos con cámara de comercio porque si nosotros

les llevamos a eso, pues se descapitalizarían porque son negocios de subsistencia económica de las

familias, ósea no son negocios de capitalización, no son negocios donde quedan excedentes

grandísimos, sino que son negocios para comer”(funcionaria UMARV, líder Autonomía

Económica).

Dicha misión para el desarrollo del sujeto víctima, inicia con un diagnóstico donde se determina

su grado de vulnerabilidad y su necesidad de atención, este diagnóstico ocurre a través de una

visita domiciliaria o la indagación de las condiciones que rodean la vida del sujeto víctima. Es un

acto de determinar desde afuera la necesidad de desarrollo de la víctima y ofrecer lo que desde el

Estado se plantea como solución a su déficit o necesidad, de ahí la existencia de rutas de atención

prefijadas que responden a maneras de concebir el restablecimiento de las víctimas en la ciudad y

que son heredadas por las mismas como recursos estructurales (Giddens, 2011), oportunidades

sociales y servicios económicos (Sen, 2000). Esta noción de diagnóstico para la ayuda se encuentra

expresado dentro de los testimonios de las víctimas, así:

“Entonces en la UMARV al visitarnos y al ver qué éramos, porque tú te presentas donde equis

persona, no saben quién eres. Pero nosotros les expusimos el caso porque ellos no sabían cuál era el

grupo de nosotros, ni rap, ni nada de eso, ellos no entendían nada de eso. Llegaron, nos hicieron las

Page 36: SENTIDOS DE LA VICTIMIZACIÓN Y AGENCIA DE LAS VÍCTIMAS

33

visitas y ahí fue donde los conocimos, conocimos mucha gente y los invitamos a nuestra casa, les

presentamos nuestro estudio y ahí conocieron nuestra música (…). Entonces ahí fue que ellos dijeron

‘no muchachos, a ustedes hay que ayudarles’, hicimos un proceso y nos invitaron a unos cursos”

(Andrés, 26 años).

“Usted va, por ejemplo a pedir una vivienda, y hay viviendas gratuitas. Si usted como víctima va

peinado y organizado, dicen: ‘no ella no tiene necesidad, vamos a ver en qué grado de vulnerabilidad

está’. Así paso lo mismo con las ayudas, con las indemnizaciones, que si a usted lo van a indemnizar,

hay que mirar usted en qué grado de vulnerabilidad esta, si usted dijo: ‘ah, yo tengo una unidad

productiva’, ‘ah no, ya ella dejó de ser vulnerable’, entonces ya no te dan las ayudas humanitarias,

sino que ya te dan una indemnización y esa indemnización usted tiene que aprender a vivir con eso,

y esa indemnización es tan poca que usted no le va alcanzar para comprarse una casa, ni le va alcanzar

para ninguna otra cosa" (Silvia, 35 años).

De manera general, el diagnóstico para la ayuda tiene como punto de partida el reconocimiento de

la víctima por parte del Estado, lo cual se realiza a través de una declaración que la ingresa en un

sistema generado para atenderla. Una vez la víctima es reconocida se integra al mercado de la

"ayuda", que en el caso concreto de las intervenciones que convocan este análisis, involucra el

acceso a recursos económicos. En este punto, vale la pena cuestionarse por el real efecto de este

reconocimiento del estatus de víctima (De Greiff, 2011), pues si bien debería contribuir al

restablecimiento de la víctima como un ciudadano, en la práctica de estos proyectos parece estar

más orientados a llevarla con más fuerza a “habitar el lugar de víctima” (Truñó, 2010) para tener

acceso a los “recursos” y “oportunidades” ofrecidas por el Estado.

“Se demuestra que se es víctima con la historia clínica, se demuestra con el denuncio en Fiscalía.

Actualmente nos reconocieron como víctimas y ellos nos dan un código de caracterización, ellos

manejan como un código, entonces buscan el código de las familias, entonces ellos dicen: ‘la familia

Gutiérrez está reconocida desde el 2008 bajo el código tal’. Entonces digamos si usted está

reconocida con el código de desplazados, dicen: ‘Ah sí, es este’. De hecho para entrar acá fue lo

mismo, usted es víctima a ver la cédula: ‘ah sí, usted es reconocido entonces sí, entonces venga pues’

(Silvia, 35 años).

En el mercado de la ayuda, el sujeto víctima se convierte de manera estratégica en un tramitador

de ayudas humanitarias, como una manera de aprovechar los recursos y oportunidades ofrecidos

por el Estado para tratar de solucionar situaciones cotidianas. Este escenario refuerza aún más el

Page 37: SENTIDOS DE LA VICTIMIZACIÓN Y AGENCIA DE LAS VÍCTIMAS

34

sentido de la víctima como un sujeto de ayuda, sentido que termina por ser funcional al discurso

neoliberal que le transfiere a la misma la responsabilidad de tramitar su sostenimiento dentro de

las rutas prefijadas de antemano para ella, ofreciendo un falso escenario de “libertades” (Sen,

2000), donde las posibilidades son limitadas:

“Nosotros como víctimas no vamos a salir nunca de un sistema de víctimas, pero no estamos bajo la

responsabilidad del Estado, o sea, el Estado no tiene por qué sostenerme toda la vida. Entonces ahí

fue donde llegaron madres hace quince años con niños de cuatro o cinco años, ya tienen mayoría de

edad, entonces en ese momento también era un negocio que usted llegara con ocho, diez y quince

personas porque entre más personas tuviera usted en su núcleo familiar, más grande iba a ser el

mercado y más ayuda le iban a dar. Todo eso lo fui aprendiendo yo porque yo ni ayuda humanitaria

recibí, pero empecé a caminar en todo esto y empecé a ver. Ya entonces se crea la Ley 1448 y ellos

dicen: ‘es que la Ley 1448 nos esta re-victimizando’, no, lo que la Ley 1448 quiere es realmente

restablecer sus derechos y que si usted llegó a la ciudad de Medellín, se convirtió en un ciudadano

de la ciudad de Medellín, busque las ayudas, todos los programas que tiene la ciudad para usted”

(Eugenia, 53 años).

En esta misma línea, otro de los elementos que puede resaltarse dentro de las entrevistas es el

estímulo de este tipo de procesos para reforzar la necesidad de que los sujetos asuman la marca de

ser “víctima”, pues si esta no se asume no se accede a la ayuda y en este sentido se es un sujeto

que deambula. Por esta razón, las mismas empiezan a luchar con su construcción como ciudadanos

porque sienten que tienen que seguir cargando con "la retórica de la marca", es decir, con la

posición de individuo traumatizado por la experiencia violenta (Montenegro y Piper, 2009), para

seguir accediendo a la misma. Finalmente las víctimas terminan relacionándose con esa marca

como un mal necesario, es una cruz con la que tienen que seguir cargando porque los procesos

institucionales provocan y crean la necesidad de que se la atribuyan en función no sólo de

identificarlas, sino también de atenderlas y restablecerlas:

“Lo que pasa es que lastimosamente, digamos hay lugares del Estado en que para usted acceder a

una ayuda tiene que ir esperando como lastimas, y eso no es así. Digamos en mi caso particular soy

víctima, soy desplazada, pero eso no es algo que me tiene que identificar a mi como persona. A mí

lo que me identifica es mi nombre, pero no de que ‘ay porque usted es víctima venga yo le compro’,

‘porque es víctima venga yo le ayudo’. No, soy una persona común y corriente, que tengo una

condición especial, sí. ¿Cuál condición? Que soy víctima, soy desplazada pero eso no le impide a

Page 38: SENTIDOS DE LA VICTIMIZACIÓN Y AGENCIA DE LAS VÍCTIMAS

35

uno poder superarse y salir adelante como cualquier persona. Simplemente lo que uno pide es una

ayuda para salir adelante, una ayuda para que me conozcan, pero no una ayuda en el sentido de que

‘pobrecita le ayudamos’, no, entonces es como tampoco como inspirar esa parte (Silvia, 35 años).

Recapitulando, para acceder a la ayuda la víctima debe ser diagnosticada, reconocida, identificada

y se debe determinar su grado de vulnerabilidad, vulnerabilidad que en este contexto no es

entendida los términos planteados por Butler (2006), como un reconocimiento subjetivo que

configura posibilidades de acción y resistencia, sino como una manera de declarar condiciones

objetivas de la vida de la víctima a partir de estándares instaurados para determinarla. Esto

responde a la lógica misma del desarrollo, bajo la cual el grado de necesidad y vulnerabilidad más

que ser declarado por la víctima es determinado por las instituciones que la atienden. Allí la víctima

se configura como un sujeto necesitado y el Estado se instaura como el salvaguarda y oferente de

libertades muy restringidas. En este contexto, es el Estado quien parece llevar "el desarrollo" al

sujeto víctima, pero un desarrollo muy centrado en la dimensión económica y muy limitado a los

tiempos y recursos institucionales que terminan generando una dependencia de la misma frente la

institucionalidad. Esta estructura institucional es propicia a crear, reforzar y estimular sentidos de

la “victimización estereotipados”, bajo los cuales la víctima es un receptor de ayuda y portador de

una marca, transfiriéndole unos hábitos concretos que terminan por estar presentes incluso en el

discurso de algunas de ellas:

Eso dizque es un ejercicio pero yo digo que es un ejemplo que les estamos dando a toda esa gente

que está allá sentada para que la gente aterrice, reflexionen, despierten, pongámonos a hacer algo,

porque hay veces que les ayudan, les va muy bien, pero no, no toman conciencia, vinieron al mundo

a esperar que les den (Beatriz, 64 años).

No obstante, en la mayoría de los casos, el acervo de experiencia de las víctimas las lleva a ser

muy críticas y a resistirse a la adopción de “la marca”, por considerar que esta se identifica muy

poco con su experiencia personal de sobrevivencia:

“Nosotros no sabíamos normalmente qué era. Cuando llegamos yo miraba y decía: ‘pero la gente que

hay acá es del campo’. Nos fueron explicando, nos fueron diciendo ‘bueno, qué pasó’. Entonces

nosotros explicamos y ahí fue cuando ya nos dijeron: ‘eso es un desplazamiento intraurbano’.

Nosotros nunca llegamos allá con el asunto de que nos dieran dinero o un fortalecimiento. Nosotros

no sabíamos nada, absolutamente nada. Yo realmente veía la ropa y decía: ‘Uy, están muy mal, ¿yo

por qué estoy acá, yo en serio estoy así de mal?’. (Andrés, 26 años).

Page 39: SENTIDOS DE LA VICTIMIZACIÓN Y AGENCIA DE LAS VÍCTIMAS

36

“Es muy difícil, yo la primera que salí de la UAO19 yo salí llorando, yo no creí que me iba a tocar.

Uno siempre piensa que víctima es la persona de más bajos recursos, la persona de un pueblo, que

no es estudiada. Lo veía uno así, el que es víctima es porque es malo, porque se metió en algo”

(Patricia, 44 años).

“Es que por eso yo te decía, el Estado tiene la culpa por el hecho de que nos dicen siempre: ‘dele el

papelito, digan que son víctimas del conflicto armado’. Entonces por qué de entrada yo tengo que

decir eso, es lo que recalco mucho. Yo digo: ‘no, pero es que eso es como pedir limosna a la gente’

(…) Nos hacen ver como los más pobrecitos, como los que menos tenemos. Sí nosotros somos los

más pobres y los que menos tenemos en este momento es por culpa del Estado, entonces no nos

hagan ver como más mendigos de lo que ya nos han hecho pasar, también necesitamos, y estamos

luchando día a día por una calidad de vida” (Silvia, 35 años).

Por esta razón, algunas de ellas han resignificado la experiencia de victimización y han construido

nuevos significados sobre la misma, entendiéndola como una oportunidad y estableciendo posturas

estratégicas de adopción de dicha “marca” o de “esencialismo estratégico” (Truñó, 2010) sin

conformarse con el hecho de que esta etiqueta las determine. De esta manera aparece el sentido de

"victima emprendedora", donde las víctimas empiezan a identificarse con la lógica del

emprendimiento transmitida por los proyectos, lógica que responde a una intención del programa

de Autonomía Económica de otorgarle al restablecimiento un carácter duradero. Esto puede

rastrearse dentro del discurso y los testimonios de las víctimas, quienes dentro de sus afirmaciones

hacen un rescate continuo de su papel como emprendedoras y de su capacidad para trabajar por

sus negocios.

La lógica del emprendimiento opera en el marco de los proyectos como un discurso y “recursos

estructural” (Giddens, 2011), que transmite significaciones que le llegan a las víctimas en su

interacción con los espacios ofrecidos por el programa de Autonomía Económica. Este recurso

estructural termina por habilitar la posibilidad de que las víctimas reproduzcan la estructura e

interpreten de manera estratégica su ingreso al sistema de "ayuda" en cuanto se asume esta

identidad, sin dejar de asumir otras posturas como las del liderazgo y la formación de negocios

que le ofrecen otros marcos de acción a la misma:

19 Unidades de Atención y Orientación para las víctimas en Medellín que se encuentran localizadas en algunos sectores de la

ciudad.

Page 40: SENTIDOS DE LA VICTIMIZACIÓN Y AGENCIA DE LAS VÍCTIMAS

37

“Si, son los funcionarios del Programa de Autonomía Económica de la UMARV] los que han estado

informándome y, como te digo, el desplazamiento para mí se formó como una oportunidad, una

oportunidad de vida de la cual la he aprovechado al máximo. Entonces eso me ayudo a ayudarle

mucho a las mujeres, a decirles es que uno es capaz, y si yo fui capaz usted es capaz de hacer todo lo

que sea” (Patricia, 44 años).

“El Estado así como invierte plata que en la paz, debería de invertirle más a las víctimas, nosotros

deberíamos de tener un punto de venta hace mucho tiempo y ahí si acepto que me digan que soy

víctima y desplazada (…) No como debajo el metro que le dan una chasa, eso tampoco es ayuda eso

es como seguir la mendicidad. Yo no pido limosna, pero entonces vendo confites y tampoco es así.

Entonces hacer algo grande por las víctimas, nosotros deberíamos de tener un punto de venta hace

mucho tiempo” (Silvia, 35 años).

Para algunas de las personas entrevistadas, el pasar de la "marca" de la víctima necesitada de ayuda

a ser quien emprende proyectos para su desarrollo personal, no deja de representar una lucha

cotidiana entre los sentidos que la constriñen y los sentidos que ella va construyendo en su

experiencia, que se expresan en nuevos marcos de acción y nuevas formas de nombrarse. En este

contexto, instalar la noción de “emprendedora” se dificulta pues de entrada el llevar la marca de

víctima implica caracterizar el papel y experimentar una dificultad para representar otros

personajes:

“Crear empresa tampoco es fácil para una persona que es víctima, una persona que no tiene dinero

sino que vive de las oportunidades que le da la vida… Yo les cuento a todas las mujeres que les han

ayudado que si es posible pero cuidando, cuidando esa poquita semilla que les dieron y mirando

hasta donde pueden llegar” (Patricia, 44 años).

“Yo me defino como una persona común y corriente que tiene una situación, porque no es una

condición si no que es una situación, donde pido no ser reconocida como víctima, bueno, ya estoy

reconocida como víctima, pero ese reconocimiento muchas veces es como la marca que yo te decía.

Por ejemplo, estamos aquí en esta feria ¿yo qué necesidad tengo de decirle a usted que viene aquí y

me dice: ‘hola buenos días, a como los bolsos’ y yo le diga: ‘soy víctima del conflicto armado’, yo

creo que eso a usted no le interesa. Usted viene a preguntar cómo es el bolso, cómo lo hace y sus

características, acá se nota mucho eso, [que la gente dice]: ‘somos víctimas del conflicto armado,

hacemos estas artesanías para salir adelante’. Sí, es verdad pero no hay que decir en todo momento

que somos víctimas, simplemente: ‘soy artesana y hago estos productos’ y ¿por qué me compran?

porque el producto es bonito, es más novedoso, no porque sea víctima” (Silvia, 35 años).

Page 41: SENTIDOS DE LA VICTIMIZACIÓN Y AGENCIA DE LAS VÍCTIMAS

38

En este sentido, los proyectos analizados expresan el dualismo de la estructura planteada por

Giddens (2011) al funcionar como constrictores en la medida en que asimilan el desarrollo del

sujeto víctima desde el plano económico, olvidando otras problemáticas estructurales presentes en

sus vidas, tales como la discriminación, la exclusión social y la desigualdad de género, y sirviendo

como canales de transmisión de sentidos de la victimización que ponen a la víctima en el plano de

la ayuda y que pueden llegar a desconocer su estatus como ciudadana acreedoras de derechos.

Pero también operan como recursos de la estructura, ofreciendo a la víctima a través de las apuestas

y enfoques de las políticas de restablecimiento, nuevas formas de significarse. De este recurso

estructural se deriva la noción de “víctima emprendedora”, sentido que la misma adopta de manera

estratégica para asumir nuevas prácticas, tales como la “agencia estratégica” Lister (2003, 2004)

citada por Coulthard (2012).

4.3.Víctimas y capacidad de agencia: Aportes y deficiencias de los proyectos en la

ampliación de libertades para el desarrollo humano.

A grandes rasgos, puede considerarse que los proyectos que convocan el presente análisis, se

enfrentan con deficiencias relacionadas con la manera en que opera el proceso de atención a las

víctimas en la ciudad, contribuyendo en la expresión de algunos tipos de agencia que no dejan de

estar determinados por los marcos de acción y libertades restringidas que ofrecen. No obstante, en

la relación de la víctima con la estructura institucional, esta no necesariamente aparece como un

sujeto absolutamente determinado, pues sus experiencias y trayectorias tienen un peso importante

que entra en juego en el proceso de la implementación de las intervenciones y le permite

resignificar la experiencia de la victimización y ponerla a su favor para empezar a significarse

desde otras dimensiones.

Uno de los primeros elementos encontrados dentro de lo expresado por los sujetos entrevistados,

es que los aportes del fortalecimiento a UP en la ampliación de libertades para el desarrollo humano

y el ejercicio de la capacidad de agencia de las víctimas se encuentra muy determinado por las

experiencias personales previas a la participación de los proyectos, experiencias que se constituyen

en terrenos abonados para que dichos procesos de intervención logren este efecto. Dichos terrenos

abonados corresponden al ejemplo de mujeres que experimentaron además de la victimización

generada en el marco del conflicto armado, desigualdades como la de género o algún tipo de

discriminación relacionada con situaciones de discapacidad física. Hacer frente a estas situaciones

Page 42: SENTIDOS DE LA VICTIMIZACIÓN Y AGENCIA DE LAS VÍCTIMAS

39

las empoderó de antemano para ejercer poder en su vida personal al buscar transformar sus

condiciones de vida y a vislumbrar la necesidad de instaurar cambios sociales. Algunos de sus

testimonios de vida nos dan cuenta de que si bien estos proyectos no responden a un enfoque de

género, la superación de este tipo de desigualdad se constituye en un elemento necesario en la tarea

de restablecer a las víctimas:

“Sencillamente por locura me casé a los 17 años… luché mucho porque ese matrimonio funcionara,

tuve tres hijos haciéndome ideas mentales como se dice, de que mi esposo iba a cambiar, por lo que

a los 20 años … me separé. Eso ha sido un trajinar constante, eso fue mi primer desplazamiento en

cuanto a mi vida, en el matrimonio” (Eugenia, 53 años).

“Como te digo soy madre cabeza de hogar y cuando el papá de mis hijos me dejó él me aplastó y me

aplastó al modo de decirme que yo no era capaz, entonces fue como una lucha demostrarle yo si soy

capaz, soy capaz de sacar mis hijos adelante y soy capaz de ser una gran persona y hasta el momento

todavía me falta mucha lucha pero lo he logrado y lo seguiré logrando” (Patricia, 44 años).

En estos casos, al proveer capacitación y generar redes de apoyo para los sujetos víctimas, los

proyectos generaron nuevos marcos y posibilidades de acción de estas mujeres, quienes empezaron

a ejercer su agencia movidas por la reivindicación de sus derechos y por el interés de aportar a

otros. Esta puede interpretarse como una práctica situada de “agencia ciudadana” Lister (2003,

2004) citada por Coulthard (2012), en la medida en que contribuye sustancialmente en la

transformación de condiciones de vida personal y colectiva y son una expresión de poder cotidiano

de las víctimas que se expresan como reivindicaciones potentes de género:

“Nosotros con el Ministerio del Interior y aquí con la Casa de la mujer emprendedora, hicimos

muchos talleres haciendo propuestas a la ley 1448. Entonces yo en una reunión de esas … pedí la

palabra, con conocimiento o no, porque es que los funcionarios me apabullaban mucho porque yo no

tenía conocimiento de las leyes, me cogían por fuera y me decían: ‘usted sabe que dice la Ley 387

en su decreto no sé qué con su artículo tal’, y yo les decía: ‘amor, que pena pero es que yo no soy

abogada, yo solamente sé que tengo un derecho y que lo voy a hacer valer’” (Eugenia, 53 años).

“Creaciones me da para eso, yo no tengo más entradas, ni tengo ayudas, no tengo compañero, no

tengo nada, entonces soy yo la que sostengo todo mi hogar. Entonces mira que ha mejorado, pero

¿cómo he mejorado? Porque he estudiado, porque he luchado (…) No está dando mucha rentabilidad

pero es otro sueño que se está construyendo día a día. Te digo, no tengo económicamente dinero,

pero si ha cambiado mi nivel social de vida a comparación de cómo era cuando vivía en mi casa

Page 43: SENTIDOS DE LA VICTIMIZACIÓN Y AGENCIA DE LAS VÍCTIMAS

40

propia de donde me desplazaron, en San Javier. (...) Sacara partido o no sacara partido, aprendía, iba

desarrollando el mercadeo, las ventas que eran muy difícil para mí, y entonces debido a esto quisieron

formar ellas una cooperativa y las muchachas me escogieron como directora, en estos momentos

estamos luchando para que esa cooperativa nos salga adelante y quiero como formar con ellas una

línea, una línea del siguiente producto (...) Entonces eso me ayudo a ayudarle mucho a las mujeres,

a decirles es que uno es capaz, y si yo fui capaz usted es capaz, porque si yo fui capaz usted es capaz

de hacer todo lo que sea” (Patricia, 44 años).

A partir de lo anterior, puede decirse que uno de los grandes aportes de este proyecto en la

ampliación de libertades para la agencia es la de otorgar redes de apoyo para la comercialización

y distribución de productos a través de la posibilidad de participar en la Estrategia Crisálidas

Emprendiendo Sueños, espacio que puede permitir una generación de ingresos sostenible en el

tiempo y garantizar que los productos sean distribuidos en espacios más allá de los provistos por

la institucionalidad.

“Entonces ir a Colombia Moda porque a ahí nos dimos a conocer y se hicieron como muchas alianzas

y la gente pues en el caso mío me encargaban bolsos, me decían si yo quiero un bolso grande, de tal

color, entonces de ahí me salieron varios encarguitos, entonces eso ya fue después de Colombia

Moda, ellos fueron a mi casa, les hice su producto. En Colombiatex era como mirar la maquinaria

que iba como sacando pero digamos que todavía no, porque yo no tengo capital para invertir en

maquinaria, y digamos que tampoco me gustaría porque entonces mi producto ya dejaría de ser

artesanal” (Silvia, 35 años).

De igual manera, los aportes de los proyectos se pueden traducir en mejoramientos cotidianos de

las condiciones de vida de las víctimas, que cambian la vida personal de las mismas e impactan su

entorno próximo:

“Con este negocio en este momento ayudo al sostenimiento de mi casa, es decir, para el arriendo no

alcanza, claro que en temporada como amor y amistad o en diciembre las ventas se disparan (…) Por

ejemplo la calidad de vida con respecto a la economía cambio, la calidad en cuanto al trabajo cambio,

porque ahora tengo como algo que hacer a pesar de que voy a cumplir 62 años, este trabajo para mi

es una bendición porque me entretengo, paso el tiempo entretenida, me gusta interactuar con las

personas, me gusta lo que hago y me ha cambiado en el núcleo familiar, mi hija ahora que está en la

casa me ayuda mucho con esto y mi esposo que era tan negativo se ha dado cuenta que se puede …

Page 44: SENTIDOS DE LA VICTIMIZACIÓN Y AGENCIA DE LAS VÍCTIMAS

41

Él no me apoyaba, pero ahora que ve que entra un ingreso a la casa por medio de los chocolates me

apoya, entonces son muchas cosas” (Ana, 61 años).

Además de los elementos mencionados, fue interesante apreciar en las entrevistas que el escenario

de libertades ofrecidos por el fortalecimiento a UP, aunque limitado, favorece el ejercicio de una

capacidad de “agencia estratégica” que sin generar cambios radicales en los hábitos y formas

actuales de vida de los sujetos víctimas, si se entienden como un instrumento de desarrollo y de

transformación a futuro20. Este es un contexto propicio para que el sujeto adopte de manera

estratégica "la marca" de ser víctima en función de trabajar por cambios que muy probablemente

no se ven reflejados en sus condiciones de vida actuales, pero que se pueden materializar en

escenarios próximos. Esta situación puede interpretarse como una “práctica situada de poder”

(Giddens, 2011) en la medida en que el sujeto víctima aprovecha estos recursos y oportunidades

estructurales, además de las libertades económicas ofrecidas para generar efectos futuros sobre su

vida, de ahí que si bien la UP no se considera una única fuente de ingresos, ni el único medio para

la subsistencia y la autonomía, si se le aprecia como un camino para el logro de proyectos futuros

y el desarrollo de otras libertades que, en muchos de los casos, están asociados con la continuidad

de los emprendimientos generados por ellas:

“Trabajar mucho, igual si no somos constantes y no se trabaja en esto no vamos a lograr nada.

Entonces siempre estamos muy enfocados ya sea en lo que nos guste, en el estudio de grabación o

por aparte y no dejar de lado la empresa porque igual ahí es donde tengo la estabilidad económica”

(Andrés, 26 años, UP).

“Mi meta es conseguirme una casa, una casa de primer piso, donde yo pueda mejorar mi calidad de

vida, la calidad de vida de mis papás que ya son dos adultos mayores, como estar más tranquilos, no

como a la espera de esto, entonces tener una casa propia, como ir subsanando muchas cosas. Yo digo

que teniendo una casa propia … para mi seria mucha ventaja en lo económico” (Silvia, 35 años).

“Que Creaciones este llena de empleadas y se sostenga, ese es una de los principales sueños, y en

cuestión laboral ese es el que más me gustaría a mí, que pudiera estar dándole empleo a bastante

20 Desde el enfoque que aquí se plantea el cambio se entiende como un proceso que se da en un espacio y un tiempo establecidos,

incluyendo el plano de la subjetividad y lo cotidiano. En este contexto, los sujetos cuentan con una conciencia reflexiva llena de

sentidos a partir de su realidad y de ellos mismos, sin embargo cuando se enfrentan a nuevas reglas y recursos reflexionan en torno

a ellos y los agregan a su acervo o a su propia conciencia reflexiva permitiendo la re significación de su experiencia y permitiéndoles

nombrarse desde otras dimensiones. En este sentido, el cambio se entiende más desde el obrar de los agentes, integrando nuevos

hábitos y rutinas a sus formas de vida, obrando y relacionándose desde nuevas formas discursivas y ampliando sus marcos de

acción.

Page 45: SENTIDOS DE LA VICTIMIZACIÓN Y AGENCIA DE LAS VÍCTIMAS

42

[gente] sin tener yo que estar sufriendo porque falta dinero, porque no hay con que pagar una nómina,

porque ya llegaron las cuentas y no hay con que pagar. Pero lo principal que yo deseo es ser feliz y

creo que es lo más difícil, es lo más difícil pero se está logrando” (Patricia, 44 años).

En este contexto, la práctica de agencia estratégica no sólo en lo referido a los proyectos

analizados, sino a nivel general significa continuar participando de procesos institucionales como

un ejercicio que debe ocurrir a la par con el trabajo personal por objetivos futuros:

“Yo entendí que todo lo que se llama participación gubernamental es un sofisma de distracción para

las comunidades (…) Porque es que ellos necesitan, todos los que son funcionarios que trabajan en

participación, es poder ganarse su plata, pero desde los gobiernos ya tienen creado que va ser, cómo

van hacer con las víctimas y entonces las víctimas llegan y dicen: ‘Nosotros queremos que en el

barrio hagan esto’, entonces montan esto pero debajo van otras cosas que en ningún momento las

montamos nosotros, sino que ya venían creadas, ¿todo para qué?, para poder justificar los dineros

que gastan (…) Entonces yo de todas maneras siempre a la par que yo estaba aprendiendo como

lideresa, trabajando por las comunidades, yo nunca deje mi negocio” (Eugenia, 53 años).

Sumado a lo anterior, el ejercicio de prácticas de agencia estratégica se constituye en una manera

de producir resistencia cotidiana de la víctima en un contexto de limitados recursos estructurales,

los cuales operan bajo unos tiempos establecidos, recursos económicos mínimos y con requisitos

de participación determinados y plantean rutas de atención prefijadas a las que el sujeto víctima se

tiene que adaptar:

“Que nos den, ósea estamos de mendigos, y las instituciones nos re victimizan porque dicen: ‘es que

no cumpliste el tiempo para estar acá’, para darle a uno cinco mil o diez mil pesos” (Eugenia, 53

años).

Sumado a lo anterior, cuando el sujeto víctima es informado de las rutas que existen para su

atención y asistencia, el espectro de opciones ofrecidas para ella responden a determinadas lógicas

y visiones estatales, que se presentan como una manera de empoderarlas frente a su proceso de

restablecimiento, pero que no las incluyen de una manera activa: “Si [la víctima] lo busca porque

nosotros ya le hemos brindado toda la asesoría y le decimos: ´mira esto está abierto para ti, tú lo

puedes hacer ¿quieres?´” ((Funcionaria UMARV, líder de Autonomía Económica).

Las rutas de atención y asistencia comprenden, en primera instancia, el mencionado diagnóstico

para la ayuda o el diagnóstico para el desarrollo de la víctima. En segunda instancia, las víctimas

Page 46: SENTIDOS DE LA VICTIMIZACIÓN Y AGENCIA DE LAS VÍCTIMAS

43

que entran a hacer parte del proceso de fortalecimiento reciben capacitaciones en temas

relacionados con el emprendimiento y asesorías individuales en la construcción de sus planes de

negocios y son orientadas en función del acceso a espacios de formación académica. Dicho en

palabras de la líder de Autonomía Económica de la UMARV para el periodo 2012-2015:“lo que

se hace a través de este proceso es enrutarlas. O sea, nosotros priorizamos esas familias que

estamos fortaleciendo para insertarlas a la ruta de empleo y educación”.

En este trasegar, los proyectos en mención presentan dos deficiencias que se traducen en

dificultades para la ampliación de libertades y ejercicio de la capacidad de agencia de las víctimas

y que pueden dar cuenta de problemas que enfrenta el modelo de atención a las víctimas en

Medellín. En primera instancia, se encuentra deficiencia para acompañar procesos que se apartan

de lógicas muy predeterminadas de "lo productivo", donde se expresan diferentes comprensiones

del desarrollo, que en determinado momento terminan por afectar la continuidad de los procesos

de fortalecimiento a los emprendimientos generados por las víctimas.

En este sentido, si bien existe una apuesta por parte de los funcionarios de la UMARV en función

de rescatar los saberes y gustos de los sujetos que participan del fortalecimiento; también entran

en escena visiones muy determinadas por las lógicas de desarrollo económico, bajo las cuales lo

"productivo" se equipara con la idea de generar ingresos, quedándose muy corto en el

acompañamiento otro tipo de emprendimientos. Esta aseveración es evidenciada en el contraste

que presentan los siguientes testimonios:

“Estamos tratando de fortalecer lo que ya hay, lo que la gente empíricamente ha hecho y lo que le

gusta.; entonces esa situación a mí me parece que ha sido muy importante porque recogemos la

historia tradicional y también la multiculturalidad” (funcionaria UMARV, líder Autonomía

Económica).

“Lo que pasa es que nosotros somos un caso especial dentro de la UMARV, porque es que cuando

yo llego a los procesos me dicen ‘¿y su producto qué es? ¿Cuál es su cosa Productiva?’ Porque eso

tiene un nombre, su Unidad Productiva. Entonces yo les digo ‘un estudio musical’, entonces me

miran y empiezan a voltear hojas, pero es que acá no dice cómo tiene que hacer ni cuanto se gasta,

cuánto gana, el IVA de la luz, que el IVA de esto, que el IVA de aquello. Entonces yo llego y les

digo ‘bueno y ¿entonces cuánto es el IVA de una pista?’ Y ellos dicen ‘¿y qué es una pista?’ Porque

es un caso especial, ellos nunca habían tenido esos casos. Ellos atienden son tiendas, supermercados,

Page 47: SENTIDOS DE LA VICTIMIZACIÓN Y AGENCIA DE LAS VÍCTIMAS

44

peluquerías, cosas así. Mientras que nosotros llegamos y dijimos ‘nosotros somos es músicos y

nuestro fortalecimiento es musical totalmente’” (Andrés, 26 años).

Esta deficiencia tiene que ver con una comprensión de la generación de ingresos como un paso

definitivo y único para el logro de la autonomía de las víctimas donde se le transfiere la

responsabilidad a la misma de producir su vida a partir de unas garantías netamente económicas,

lo que pone en evidencia que los procesos de restablecimiento ofrecen un espectro de libertades

muy fragmentado y reducido que difícilmente puede aportar en la superación de los problemas de

desarrollo que afectan de manera directa la vida de las víctimas y que junto con la victimización

requieren de soluciones por parte del Estado. En este contexto, se le otorga a la víctima un

desembolso21 que es finito y que involucra un acompañamiento en la construcción de planes de

negocio y en la compra de insumos, desembolso que es útil en la tarea de fortalecer la UP pero que

no es determinante en generar la continuidad de la misma. De esta manera, si la UP no cuenta con

potencial de comercialización, se va extinguiendo con el paso del tiempo:

“Es que ese fue el asunto, que la UP ya empezó a pedir resultados (…) Entonces ya empezamos a

ver y empezaron a pedir cuentas de grupo. ¿Cuánto fue del concierto? ¿Cuánto fue de lo otro? ¿Por

qué le paga a este eso? Y se empezaron a generar problemas y yo decidí cancelarlo y quedamos con

un estudio, con un súper mega estudio que nadie utilizaba” (Andrés, 26 años).

En segunda instancia, el proceso de fortalecimiento por si solo es deficiente en la generación de

autonomía y auto sostenibilidad de los sujetos víctimas. Ello ocurre por el hecho de que el

fortalecimiento se cimienta principalmente en el restablecimiento de derechos económicos y si

bien promueve un acompañamiento a la UP, la misma está condenada a extinguirse cuando no

responde a la lógica de productividad del proyecto. En este sentido, los proyectos expresan una

debilidad general de los programas institucionales para las víctimas, pues al estar centrados en una

realidad no se articulan con otras demandas y necesidades de las víctimas que son igualmente

importantes.

De ahí que el restablecimiento en los términos en que se encuentra ideado en el marco de los

proyectos, debería dar un paso más allá del plano de los “servicios económicos” y sustentarse sobre

la idea de un desarrollo más humano que contemple un mayor espectro de ampliación de libertades

21 De acuerdo con la Alcaldía de Medellín (2013), para este momento el valor del desembolso se definía según lo estipulado en el

Plan de Desarrollo Municipal. Algunas de las víctimas entrevistadas hablan de un promedio de dos a tres millones de pesos. Cada

UP puede recibir hasta dos fortalecimientos.

Page 48: SENTIDOS DE LA VICTIMIZACIÓN Y AGENCIA DE LAS VÍCTIMAS

45

de los sujetos víctimas. Si bien el enfoque del emprendimiento como elemento discursivo, podría

servir como eslabón para que el restablecimiento cuente con un “enfoque reparador” (Ley 1448 de

2011); este aún se queda corto en la tarea de trascender la lógica productiva que permea los

procesos y que se encuentra sustentada principalmente en el desarrollo económico del sujeto

víctima. Por esta razón, se plantea como un reto que los proyectos trasciendan la lógica asistencial

y ofrezca un escenario de libertades y oportunidades más amplio, como recursos estructurales que

le permitan a la víctima su actuación como agente.

Finalmente, el discurso de la ayuda y la dependencia que impera en la implementación de los

proyectos, no permite que el efecto de esta intervención sea lo suficientemente contundente en la

tarea de romper con el círculo de la informalidad laboral y de garantizar que se superen

determinantes estructurales como la pobreza y la inequidad social y económica. En consecuencia,

se reproduce una informalidad que afirma condiciones de vulnerabilidad y que puede aportar en la

construcción de un sujeto víctima como un eterno necesitado de las instituciones. Esta es una

consecuencia no esperada de estos procesos que se deriva de la manera en que opera la atención,

situación que es interpretada por las víctimas así:

“A mí no me pueden catalogar de auto sostenible, porque es que yo tengo que pensar en establecer

mi negocio y el negocio de nosotros es cargando mi hijo y yo al hombro un montón de arepas,

haciendo recorrido por todo Medellín. Eso no es dignidad para una persona que diga: ‘tengo un buen

empleo, tengo un empleo que me dignifique’. La meta mía es poder tener mi negocio establecido y

sobre todo porque sé que tengo productos que se venden y tengo la forma de analizar qué es lo que

se puede hacer (…) Vendemos bien, pero también tenemos que pagar transportes para ir de aquí hasta

allá de allá hasta acá” (Eugenia, 53 años).

Page 49: SENTIDOS DE LA VICTIMIZACIÓN Y AGENCIA DE LAS VÍCTIMAS

46

5. DISERTACIONES FINALES: LA VÍCTIMA COMO AGENTE DEL

DESARROLLO HUMANO

Los planteamientos de los capítulos anteriores dan cuenta de un proceso institucional diseñado

para las víctimas de la ciudad de Medellín, donde entran en juego discursos y visiones del

restablecimiento de derechos muy permeadas por lógicas institucionales que entienden y asocian

el desarrollo del sujeto víctima desde una dimensión económica. De esta relación, puede surgir

dos consecuencias: la primera de ellas es la creación y el fortalecimiento de sentidos de la

victimización asociados con visiones estereotipadas de las víctimas como sujetos de ayuda. La

segunda se constituye en una consecuencia de la primera, pues lo anterior puede derivar en el

hecho de que estos proyectos no tengan un efecto contundente en fortalecer otras dimensiones

importantes como el restablecimiento de su ciudadanía y con ello el hacerse acreedoras a derechos

políticos y sociales que las habiliten como sujetos con capacidad de agencia y acción. Este

escenario plantea la construcción de un sujeto víctima a través de rutas de acción prefijadas que

buscan solucionar su déficit y atender una necesidad diagnosticada.

No obstante, como lo evidencian las entrevistas, en este camino las víctimas no aparecen como

papeles en blanco para ser moldeados de manera determinante por la estructura, sino que por el

contrario cuentan con un acervo de experiencia ya sea como líderes o lideresas, ya sea por su

historia personal o por su incursión previa en otros espacios institucionales, que les permite

resignificar incluso los sentidos estructurales que la determinan. De esta manera, a partir de las

reflexiones que suscita el análisis de este caso, puede decirse que el sujeto víctima como agente

del desarrollo humano se construye a través de los proyectos en dos escenarios que pueden parecer

contradictorios pero que en últimas le permiten generar cambios en su vida cotidiana, en sus

maneras de actuar y de significarse: el hegemónico y el cotidiano.

El escenario hegemónico corresponde al planteado al inicio de este apartado, donde se promueve

como forma de restablecimiento un modelo de desarrollo económico y la víctima se entiende como

un sujeto de ayuda que requiere ser diagnosticada. En el caso analizado, esta visión de desarrollo

económico predominante es funcional a la expresión de visiones particulares sobre lo productivo,

la autonomía y el auto sostenimiento, muy mediadas por un enfoque del progreso económico como

el fin último del desarrollo y donde el restablecimiento se encuentra muy asociado con la idea de

ayuda. De ahí que la capacidad institucional que se despliega a través de estos proyectos se

Page 50: SENTIDOS DE LA VICTIMIZACIÓN Y AGENCIA DE LAS VÍCTIMAS

47

encuentre organizada para fortalecer principalmente emprendimientos en la línea de lo que se

considera tiene potencial de comercialización y que le apunte primordialmente al fortalecimiento

de capacidades para competir, emprender y desenvolverse en el campo económico.

Pero en su cotidianidad las víctimas no son sujetos pasivos o netamente inconscientes, sino que

son sujetos que por sus experiencias cuentan con recursos propios y se relacionan con los recursos

ofrecidos por la estructura a través de su conciencia, reflexividad, necesidades y emociones. Estas

últimas, le permiten a las víctimas una re significación del sentido de la victimización que las lleva

a definir estrategias y emprender acciones diferentes como las de ayudar a otros, acceder y explorar

espacios y realidades distintas a las que acostumbraban y a experimentar mejoramientos cotidianos

en sus formas de vida.

En este contexto, la víctima no necesariamente se construye como sujeto de ayuda, sino que asume

de manera estratégica la “marca” de víctima emprendedora asumiendo un “esencialismo

estratégico” que le permite construirse desde otras dimensiones y dar el paso a ser un “agente

estratégico” con posibilidades de transformación a futuro. En este sentido, si bien la categoría que

de emprendimiento se configura como el resultado de una lógica neoliberal que despoja al Estado

de su responsabilidad, se constituye en el recurso estructural que la misma aprovecha para

construirse desde otros escenarios como los negocios y el emprendimiento. Esto implica un grado

de capacidad de negociar con su propia realidad y con la estructura que se le ofrece y de asumir

estratégicamente la identidad de víctima y la etiqueta de emprendedora para empezar a trabajar

por proyectos que generen cambios futuros.

Esto permite considerar que el sujeto víctima no sólo es construido a través de las lógicas de Estado

y desarrollo, sino que también se resiste, se adapta, y también aprovecha los recursos y libertades

ofrecidos por la estructura para resignificarse como ciudadano, como agente y constructor de su

desarrollo. En este sentido, si bien esta investigación no se preguntó de manera directa por la

relación víctima, ciudadanía y desarrollo humano, de manera intrínseca permitió identificar que

las víctimas que participan en proyectos como los analizados, experimentan una lucha por ser

reconocidas como ciudadanas acreedoras de derechos. Explorar esta relación mencionada de

manera más explícita, continua siendo una tarea que no se agota y que puede arrojar grandes

conocimientos que cualifiquen los procesos de restablecimiento.

Page 51: SENTIDOS DE LA VICTIMIZACIÓN Y AGENCIA DE LAS VÍCTIMAS

48

Recapitulando, puede decirse que la relación entre victimización, agencia y desarrollo humano es

una relación de contradicciones que expresan la dualidad de la estructura presente en los procesos

asistencia y restablecimiento de derechos pensados para las víctimas. De esta manera, a la vez que

se promueven sentidos, reglas y modelos de desarrollo (como escenarios hegemónicos), se ofrecen

recursos estructurales que la víctima como un sujeto reflexivo puede aprovechar para adoptar

prácticas de poder que aporten en su vida y en la de otros (como escenarios cotidianos). El sujeto

víctima se encuentra entonces en una lucha entre ser constreñido y asumir la marca de ser víctima,

asumir esencialismos estratégicos para acceder a los procesos institucionales y reivindicar su

condición de ciudadana acreedora de derechos. En esta disputa la marca de víctima emprendedora

resuelve esta posición esencialista y la lleva a asumir una nueva identidad que se deriva en una

capacidad de agencia estratégica. En esta disputa la víctima se construye como un agente de

desarrollo que aunque constreñido, con libertades limitadas, cuenta con recursos y experiencias

que aprovecha en la tarea de significarse como sujeto activo con poder y capacidad de acción.

En este panorama, se pueden apreciar algunos aportes de los programas en la ampliación de ciertas

libertades de las víctimas. Uno de estos es la generación de redes de apoyo para la distribución de

productos que se traducen en nuevos marcos de acción para el sujeto víctima, dándose a conocer

en espacios distintos a los que acostumbraban. Este puede convertirse en un escenario propicio

para el empoderamiento y el ejercicio de la capacidad de agencia de las víctimas en la medida en

que se conjuga con sus experiencias vitales para permitirles explorar espacios desconocidos donde

puedan poner en escena su capacidad creativa.

De la acción de los proyectos también pueden rastrearse mejoramientos cotidianos como generar

pequeños ingresos para el sustento familiar, cambios en el nivel de vida, acceso a algunos recursos,

entre otros. No obstante, si puede apreciarse que sin ser muy radicales los proyectos, las víctimas

valoran de manera positiva estas rutas de acción ofrecidas por la institucionalidad como una forma

de trabajar por objetivos a futuro. Asumir la marca del ser víctima puede convertirse en algunos

casos en una acción estratégica de poder, donde el condicionamiento y los recursos de la estructura

se aprovechan y ofrece alternativas de cambio en marcos de acción que son muy restringidos.

En este contexto, si bien el presente proyecto no se preguntó de manera directa por el tema del

género, si es de resaltar que la experiencia de las mujeres cobra vital importancia porque sus

narrativas expresan la necesidad de que los proyectos de restablecimiento como escenarios de

Page 52: SENTIDOS DE LA VICTIMIZACIÓN Y AGENCIA DE LAS VÍCTIMAS

49

ampliación de libertades se convierta en un instrumento poderoso contra la desigualdad de género.

En este caso, puede decirse que los mismos aportan de una manera significativa a la resignificación

de la experiencia de ser víctima mujer, y contribuye a fortalecer y generar en ellas posiciones de

liderazgo social, comunitario y de emprendimiento. Considerar este elemento es importante en

términos de entender que todos los proyectos de acompañamiento a las víctimas deben contar con

un componente claro que le apunte a la superación de desigualdades estructurales como la pobreza,

la discriminación y la desigualdad de género.

En este sentido, los proyectos de fortalecimiento a UP y la estrategia de comercialización de

productos, deberían dar un paso contundente en la tarea de articularse con la reparación o dar el

paso hacia un enfoque reparador que garantice una mayor integralidad en la expansión de las

diversas libertades de los sujetos víctimas. Estas libertades pueden traducirse, retomando las

consideraciones de Sen (2000), en: el acceso a la educación como una manera de ampliar las

capacidades de las víctimas; el disfrute de libertades políticas que involucra el goce efectivo de

derechos como la verdad, la justicia, la reparación y las garantías de no repetición; la seguridad

protectora que garantice la posibilidad de superar condiciones de vulnerabilidad; la transparencia,

que en este caso puede relacionarse con el acceso a la información clara y oportuna sobre

programas y mecanismos de restitución de derechos y, finalmente, los servicios económicos que

pueden asociarse con los desembolsos e indemnizaciones, importantes pero no únicos en la tarea

de reparar.

Propuestas como la “reparación transformadora” (Uprimny y Saffon, 2009), adquiere relevancia

dentro de este contexto donde las demandas para este tipo de proyectos deberían ir más allá de la

garantía de unos mínimos económicos y extenderse al campo del desarrollo humano. En este

sentido, vale la pena continuar generando preguntas de investigación en torno a la manera en que

los proyectos institucionales de estabilización y restablecimiento de derechos sociales y

económicos, pueden dar el paso para convertirse en procesos con un fuerte enfoque reparador que

garantice una mayor integralidad en las acciones y que genere efectos duraderos, permitiendo

eficaces transformaciones de las realidades de las víctimas. Sin embargo, ¿cómo se puede lograr

esta transición cuando la implementación misma de los procesos de reparación se queda corta en

atender las complejas necesidades de las víctimas y en atender a estándares de integralidad como

los establecidos por las Naciones Unidas (2005)?. Esta es una pregunta que sigue estando presente

Page 53: SENTIDOS DE LA VICTIMIZACIÓN Y AGENCIA DE LAS VÍCTIMAS

50

en el campo del conocimiento y que puede convocar muchos más estudios desde diversas

disciplinas. Lo que si puede afirmarse es que para que esto suceda estas iniciativas deberían

apuntar, como bien lo anotan algunos autores, a generar procesos integrales (UN, 2005) con un

carácter procesual (Roht y Orlovsky, 2009), con obligaciones progresivas (Pérez, 2013) y con un

sentido transformador (Uprimny y Saffon, 2009).

Sumado a lo anterior, puede concluirse es que si bien estos proyectos están pensados con fines

concretos, deberían generar mecanismos para reivindicar múltiples derechos de las víctimas

articulando el restablecimiento a la reparación y garantizando aspectos como la no repetición en

la medida en que se atacan condiciones de vulnerabilidad articuladas con su experiencia. Además,

deben conjugarse con medidas de satisfacción que permitan también el acceso a la verdad y la

justicia, como mecanismos que junto con la reparación les permitan rehacer sus vidas no sólo desde

el plano de lo económico, sino también en el plano emocional y afectivo.

De igual manera, el que existan rutas de acción establecidas de antemano que no consulten la

opinión de las víctimas, no deja de ser problemático y obliga a pensar en la necesidad de que el

restablecimiento pierda ese carácter de misión para el desarrollo económico, donde se le ofrece al

sujeto víctima lo que se considera puede dar solución a su “necesidad”. Rescatar la voz de las

víctimas y sus lecturas, se constituye también en un reto de este tipo de proyectos, pues ellas

cuentan con la “legitimidad de la palabra” (Jelin, 2001) que puede ser valiosa en función de

expresar sus necesidades. En este escenario, la vulnerabilidad (Butler, 2006) más que constituirse

en un arma para determinar la vida de las víctimas y reforzar el discurso de la ayuda y el

asistencialismo, podrá ser un arma para el reconocimiento de responsabilidades por parte del

Estado y de transformación y resistencia, por parte de las víctimas.

Por lo anterior, es importante que los proyectos trasciendan la lógica de desarrollo económico

donde el restablecimiento se equipara con la idea de la libertad a nivel económico y la generación

de capital, y donde “lo productivo” se limita al plano de lo instrumental. Rescatar lo que los sujetos

víctimas “tienen razones para valorar”, ampliando de esta manera múltiples libertades y

capacidades (Sen, 2000), se constituye en una tarea y reto fundamental de los proyectos. En este

sentido, si bien se observa una intención de los funcionarios del programa de autonomía económica

por hacerlo, se hace necesario superar las barreras institucionales que imponen la falta de

Page 54: SENTIDOS DE LA VICTIMIZACIÓN Y AGENCIA DE LAS VÍCTIMAS

51

continuidad en los procesos y que reproducen problemas estructurales como la informalidad

laboral.

Finalmente, una de las conclusiones más importantes que permite la lectura propuesta en la

presente investigación, es que el desarrollo humano no es algo dado, sino que es una construcción

a partir de la puesta en escena de elementos estructurales y de sentidos particulares que ponen en

juego múltiples intencionalidades. Los estudios del desarrollo exigen una mirada menos

determinista que le den un peso a la estructura como generadora de discursos y modelos de

desarrollo, pero que también considere que los recursos y limitantes estructurales llegan a sujetos

con experiencias vitales, con capacidad de reflexión, con emociones y posibilidades y que este

escenario contradictorio produce diversos efectos en sus vidas. El sujeto víctima como agente del

desarrollo humano se produce en este escenario que puede parecer contradictorio, pero que no deja

de ser importante en la tarea de permitirle ejercer poder en su vida cotidiana.

Page 55: SENTIDOS DE LA VICTIMIZACIÓN Y AGENCIA DE LAS VÍCTIMAS

52

6. REFERENCIAS BIBLIOGRÁFICAS

Alcaldía de Medellín (2012). Plan de Desarrollo: Medellín, un hogar para la vida 2012-2015. Pp.1-

267.

Alcaldía de Medellín (2012b). Análisis de las condiciones socioeconómicas de la población

víctima de desplazamiento forzado. Síntesis de resultados, reflexiones generales y

recomendaciones, orientadas desde la línea de generación de Ingresos. Pp. 1.53.

Alcaldía de Medellín (2013). Balance del proceso de atención a las víctimas del conflicto armado

de la Unidad Municipal de Atención y Reparación a Víctimas 2012. pp. 2-30.

Alcaldía de Medellín (2013b). Intervención Metodológica Autonomía Económica en Generación

de Ingresos de Familias Víctimas de Desplazamiento Forzado a razón del Conflicto Armado

Colombiano. Pp. 1-16.

Alcaldía de Medellín. (2013c). Balance 2013 del proceso de Atención y Reparación integral a

Víctimas del Conflicto Armado en el Municipio de Medellín. Pp.2-164.

Alcaldía de Medellín (2015). Modelo de Atención y Reparación Integral a las Víctimas del

Conflicto Armado, Municipio de Medellín.

Alkire, S. (2009). Concepts and Measures of Agency. En Basu, K. & R. Kandur (eds.). Arguments

for a Better World. Vol I. Oxford: Oxford University Press. Pp. 455-474.

Bogdan, R y Taylor, S. (1992) Introducción a los Métodos Cualitativos de Investigación.

Barcelona: Paidos.

Bourdieu, P. (2007). El sentido práctico. Buenos Aires: Siglo XXI

Butler, J. (2006). Vida precaria: El poder del duelo y la violencia. Paidos (Eds): Buenos Aires.

pp.192.

CNRR, Centro de Memoria Histórica (CMH). (2009). Recordar y narrar el conflicto: Herramientas

para reconstruir Memoria Histórica. Colombia. pp. 9- 149.

Cortés, F., (2006). Entre el perdón y la justicia. Reflexiones en torno a los límites y contradicciones

de la justicia transicional En: Justicia Transicional: Teoría y Praxis (pág. 85-112) Camila Gamboa

Tapias (Compiladora). Bogotá: Editorial Universidad del Rosario.

Corporación Región (2011) Las Innovaciones en el Diseño e Implementación de la Política Pública

de Atención a la Población Desplazada en Medellín, por La Gerencia para la Atención de la

Población Desplazada. pp. 1-79.

Coulthard, S. (2012). Can we be both resilient and well, and what choices do people have?

Incorporating agency into the resilience debate from a fisheries perspective. En: Ecology and

Society 17(1): 4.

Crocker, D. & I. Robeyns (2009). Capability and Agency. En MORRIS, Ch. (ed). Amartya Sen.

Cambridge: Cambridge University Press. Pp. 60-90.

Page 56: SENTIDOS DE LA VICTIMIZACIÓN Y AGENCIA DE LAS VÍCTIMAS

53

De Greiff, P. (2006) "Justice and Reparations". En: Handbook of Reparations. Pablo de Greiff

and Oxford University Press (Eds). Nueva York. pp. 452-457.

De Greiff, P. (2011). Algunas reflexiones acerca del desarrollo de la Justicia Transicional. En:

Anuario de Derechos Humanos. (2), pp. 17–39. Disponible en: www.anuariocdh.uchile.cl

Fuentes, D. y Atehortúa, C. (2015), Sobre el sujeto-víctima: configuraciones de una ciudadanía

limitada. En: Revista Opinión Jurídica. (15) 29, pp. 65-77.

Fukuda-Parr, S. (2003). The Human Development Paradigm: Operationalizing Sen’s Ideas On

Capabilities. En: Feminist Economics 9(2 – 3). Pp. 301 – 317

Galeano, M.,E. (2004). Estrategias de investigación social cualitativa: El giro en la mirada. La

Carreta (Eds): Medellín. pp. 11- 229.

Giddens, A. (2011). La constitución de la sociedad: Bases para la teoría de la estructuración.

Buenos Aires: Amorrortou (Eds).

Giraldo, J. (2008) Conflicto armado urbano y violencia homicida: El caso de Medellín. En: Urvio,

Revista Latinoamericana de Seguridad Ciudadana. 9 (5) pp. 99-113.

Gobierno Nacional, Ley de Justicia y Paz (Ley 975 de 2005).

Gobierno Nacional, Ley 387 de 1997. Recuperada de:

https://www.unidadvictimas.gov.co/sites/default/files/documentosbiblioteca/ley-387-de-1997.pdf

Gómez, D. (2015). Of Love, Blood And The Belly: Politicization Of Intimate Ties Of Caring And

Belonging In Colombia. A dissertation submitted to the faculty at the University of North Carolina

at Chapel Hill in partial fulfillment of the requirements for the degree of Doctor of Philosophy in

the Department of Anthropology.

Gómez, D. (2016). El Encantamiento de la Justicia Transicional en la actual coyuntura

Colombiana: Entre disputas ontológicas en Curso. En: Víctimas, Memoria y Justicia:

Aproximaciones latinoamericanas al caso colombiano. Universidad Nacional de Colombia (Eds).

pp. 125-167.

Guber, R. (2005). El salvaje metropolitano: Reconstrucción del conocimiento social en el Trabajo

de Campo. Paidos (Eds): Buenos Aires. pp.8- 220.

Hartog, F. (2012). El tiempo de las víctimas. Revista de Estudio Sociales. (44). pp. 12-19.

Herrera, D. (2010). Husserl y el mundo de la vida. En: FRANCISCANUM. (3) 153. Pp. 247-274.

Hoyos, D. (2008) Elementos para una teoría de la justicia: una comparación entre John Rawls y

Amartya Sen. En: Desafíos. (18): pp. 156-181.

ICTJ, Magarell, L.(s.f). Las reparaciones en la teoría y la práctica. Nueva York. pp. 1-16.

Jelin, E. (2001) Historia, memoria social y testimonio o legitimidad de la palabra. En

Iberoamericana. 1 (1). pp. 87-97.

Langshaw, J. (1955) Cómo hacer cosas con palabras. Conferencia I. Edición electrónica de

www.philosophia.cl / Escuela de Filosofía Universidad ARCIS. 110. Disponible en:

Page 57: SENTIDOS DE LA VICTIMIZACIÓN Y AGENCIA DE LAS VÍCTIMAS

54

http://www.philosophia.cl/biblioteca/austin/C%F3mo%20hacer%20cosas%20con%20palabras.p

df

Ley de Víctimas: Ley 1448 de junio de 2011. (2011). Bogotá: Editorial Unión (Eds).

López, E.S, Lemaitre Ripoll, J. (2013). El desafío de las reparaciones transformadoras para la Ley

de Víctimas: las mujeres, las garantías de no repetición y la seguridad. Bogotá: Uniandes.

Marín, A. (2012). Teoría Crítica y Derechos Humanos: Hacia un concepto crítico de víctima. En:

Nomadas. Revista Critica de Ciencias Sociales y Jurídicas. 36 (4).

http://dx.doi.org/10.5209/rev_NOMA.2012.v36.n4.42298

Martínez, M. (2002). Comportamiento humano: nuevos métodos de investigación. Ed. trillas.

México.

Montenegro, M. y Piper, I. (2009). Reconciliación y construcción de la categoría víctima:

Implicaciones para la acción política en Chile. En: Revista de Psicología. 8(1). pp. 32-60.

Naciones Unidas. (2005). Principios y directrices básicos sobre el derecho de las víctimas de

violaciones manifiestas de las normas internacionales de derechos humanos y de violaciones

graves del derecho internacional humanitario a interponer recursos y obtener reparaciones.

A/RES/60/147 del 16 de Diciembre del 2005. Disponible en http://www.ohchr.org.

Naranjo, G., y Hurtado, D. (2004). Ciudades y desplazamiento forzado en Colombia. El

“reasentamiento de hecho” y el derecho al restablecimiento en contextos conflictivos de

urbanización. En: Desplazamiento forzado: dinámicas de guerra, exclusión y desarraigo, 279-310

Pérez, L, E. (2013). Social Policy or Reparative Justice? Challenges for Reparations in Contexts

of Massive Displacement and Related Serious Human Rights Violations. En: Journal of Refugee

Studies. Oxford University Press. Pp. 1-16.

Programa de Naciones Unidas para el Desarrollo (pnud) (1990). “Informe desarrollo humano”[en

línea], disponible en: http://www.undp.org/ spanish/about/basics.shtml.

Roht, A. N. y Orlovsky, K. (2009). “A Complementary Relationship: Reparations and

Development”. Transitional Justice and Development: Making Connections, Pablo de Greiff y

Roger Duthie (Eds.), Nueva York, Social Science Research Council and International Center for

Transitional Justice, Social Science Research Council. pp. 523-573.

Rodríguez, A. (2008). Mesa Redonda: El concepto de víctima. I Congreso Internacional

Construyendo Redes. Grupo de Acción Comunitaria. pp. 37-42.

Sen, A. (2000). Desarrollo y libertad. Bogotá, Colombia: Editorial Planeta United Nations Global

Compact (2010): Annual Review 2010. Disponible en:

http://www.unglobalcompact.org/docs/news_events/8.1/UNGC_Annual_Review_2010.pdf

Todorov, T. (1997). Los abusos de la memoria. Memoria y ciudad. En: Desde la Región: Medellín.

pp. 13-32.

Touraine, A. (1998) ¿Podremos vivir juntos?. Buenos Aires: Fondo de Cultura Económica.

Page 58: SENTIDOS DE LA VICTIMIZACIÓN Y AGENCIA DE LAS VÍCTIMAS

55

Truñó, M. (2010). Reflexiones sobre la categoría de víctima de la violencia con mirada de género.

Institut Catalá Internacional per la pau: Barcelona.

Uprimny, R. y Saffon, M.P. (2009). Reparaciones transformadoras, justicia distributiva y

profundización democrática. En: Díaz, C., Sánchez., N.C., Uprimny., R. (Compiladores) Reparar

en Colombia: los dilemas en contextos de conflicto, pobreza y exclusión. Colombia: Centro

Internacional para la Justicia Transicional (ICTJ) y Centro de Estudios de Derecho, Justicia y

Sociedad (DeJuSticia) (Eds). pp.31-71.

Uprimny, R. y Guzmán, D. (2010) En búsqueda de un concepto transformador y participativo para

las reparaciones en contextos transicionales. En: Revista Colombiana de Derecho Internacional.

(17). Pp. 231-286.

Uribe, M. (2008) Los duelos colectivos: entre la memoria y la reparación. En: Agenda Cultural.

Alma Mater. (149) 14-21.

Yin, R. (1994). Case Study Research: Design and Methods. Sage Publications,Thousand Oaks,

CA.

Page 59: SENTIDOS DE LA VICTIMIZACIÓN Y AGENCIA DE LAS VÍCTIMAS

56

7. ANEXOS

7.1 ANEXO 1: Fases de la investigación

FASE ELEMENTOS QUE LA

INTEGRAN

ESTADO

FASE 1:

Exploración,

diseño y

descripción

Diseño: selección del “caso o casos”

Definición de temas que involucran

recolección y sistematización de

información preliminar, es decir,

conocimiento del entorno y contexto

inmediato donde se llevará a cabo la

investigación.

Planteamiento de pregunta.

Evaluar factibilidad y pertinencia del

estudio.

Toma de decisiones sobre escenarios e

informantes.

Construcción e identificación de

categorías.

Caso seleccionado a través de la proximidad con algunos

programas de la ciudad para las víctimas a través de la

experiencia laboral (Casa de la Memoria para Medellín,

Sistematización del proceso de retorno Medellín-San Carlos)

Tema definido, se contó con información preliminar recogida en

medios virtuales.

Preguntas iniciales planteadas a través de aproximaciones

preliminares a la estrategia.

Pertinencia del estudio evaluada. Se encontró pertinente y viable

el estudio, se contaba con contactos en la ciudad de Medellín

para identificar los sujetos de la investigación.

Definidos criterios de selección sobre informantes (años de

participación en los proyectos, variedad de UP, insertos o no en

la estrategia Crisálidas)

Estas fueron identificadas a partir de la teoría.

FASE 2:

Focalización,

interpretación,

recolección de

la información,

registro,

sistematización.

Trabajo de campo: establecimiento de

relaciones con porteros e informantes,

recolección de información.

Registro, sistematización y análisis

preliminares.

Confrontación objetivos-logros.

Ajustes al diseño inicial.

Construcción de categorías emergentes.

Contacto con la líder del Programa de Autonomía Económica de

la UMARV y la líder de la Unidad de Atención y Orientación

(UAO) de las víctimas, barrio belencito. Visitas a UP, se

acompañó una jornada de “feria” donde las emprendedoras de la

estrategia “Crisálidas” ofrecieron sus productos en el primer

piso de la Alcaldía de Medellín. Allí se establecieron los

contactos iniciales con las víctimas y se programaron

entrevistas.

- Se transcribieron entrevistas.

- Se realizó una lectura detallada de cada una de ellas.

- Se trianguló la información a través del programa

Atlas.ti.

- Se encontraron categorías emergentes como la

“víctima emprendedora” y víctima como sujeto de

ayuda, diagnóstico para la ayuda.

FASE 3:

Profundización,

análisis,

presentación de

resultados.

Redacción de informe final.

Interpretación de los datos.

Clasificación o tipificación de la

información.

Triangulación.

Confrontación datos- Categorías de

análisis.

Informe final redactado a partir de sistematización y análisis de

la información.

Fuente: Elaboración propia a partir de cuadro construido por Galeano (2004) de proceso metodológico en el estudio

de caso (p. 73).

Page 60: SENTIDOS DE LA VICTIMIZACIÓN Y AGENCIA DE LAS VÍCTIMAS

57

7.2 ANEXO 2: Guía de entrevista sujeto víctima

Categoría Fases de la entrevista

o temática abordada Preguntas asociadas

SUJETO

VÍCTIMA

Caracterización de la

victima

1. Quién es: nombre, donde y con quién vive, cuántos años

tiene, pertenece a alguna organización?.

ESTRUCTURA Preguntas de

transición

2. ¿Y qué pasaba en ese momento con su familia?

3. ¿Cómo se describe usted o a su familia antes de participar

del proyecto?

4. ¿Cómo era su vida en ese momento?

5. ¿Qué dificultades tuvo que sortear?

SUJETO

VÍCTIMA

Sentidos de la

victimización creados

y reforzados (visiones

estereotipadas,

sentidos hegemónicos

o contra

hegemónicos)

En cuanto a la experiencia de victimización:

6. ¿Cómo se sintió en ese momento?

7. ¿A dónde o a quien acudió en ese momento?

8. ¿Con quién contó para sortear ese momento difícil?

9. ¿Supo de algún programa de alguna institución del

gobierno?¿Cuál?

10. ¿En qué tipo de procesos participó?

11. ¿Cómo cree usted que los demás lo veían en ese

momento?

12. ¿Cómo se veía a usted mismo en este momento?

13. ¿En ese momento conoció a otras personas que estaban

atravesando por su misma situación?

14. ¿Cómo las veía usted a ellas?

15. ¿A partir de ese momento empezó a hacer parte de alguna

organización de víctimas?

16. De ser así ¿En qué consistió su participación en la misma?

17. ¿Cuál era su papel al interior de esta organización?

18. ¿Le creyeron cuando usted se declaró como víctima?

19. ¿Qué tuvo que hacer para que le creyeran?

20. ¿Qué tuvo que hacer para tener acceso a los programas de

las instituciones que trabajaban con el tema?

21. ¿Tuvo conocimiento de sus derechos como víctima en ese

momento? ¿A través de qué medios los conoció?

22. ¿Qué significaba ser víctima para usted en ese momento.

ESTRUCTURA

RECURSOS,

OPORTUNIDA

DES Y

LIBERTADES

Dualidad de la

estructura (Reglas,

recursos, hábitos,

ampliación de

libertades y

capacidades)

23. ¿A qué se dedica ahora?

24. ¿Se dedica a lo mismo a lo que se dedicaba antes?

25. ¿Y le gusta lo que hace actualmente?

26. ¿Cómo llegó al proyecto?

27. ¿Cómo se enteró del proyecto?

28. ¿Cuánto tiempo lleva en el proyecto?

29. ¿De qué actividades participa en el proyecto?

30. ¿Qué ha aprendido en el proyecto?

31. ¿Lo aprendido le ha servido para algo?

32. ¿Para qué ha sido útil lo aprendido?

33. ¿Ha creado cosas nuevas a partir de lo aprendido?

Page 61: SENTIDOS DE LA VICTIMIZACIÓN Y AGENCIA DE LAS VÍCTIMAS

58

34. 34. ¿Su unidad productiva fortalecida a partir de la

participación en el proyecto le genera ingresos?

35. ¿Para qué le sirven estos ingresos?

36. ¿Ha innovado o ha cambiado en algo su producto desde

que está participando en este proyecto?

37. ¿Ha tenido acceso a espacios educativos a través del

proyecto? ¿A cuáles? ¿Qué cosas ha aprendido allí?

38. ¿Ha tenido la oportunidad de comercializar sus productos?

39. ¿A quién se los vende?

40. ¿Cuáles son sus principales clientes?

41. ¿Ha cambiado en algo su vida a partir de tu participación

en estos proyectos?

42. ¿Ha cambiado en algo su forma de verse a si mism@ a

partir de su participación en estos proyectos?

43. ¿Cómo se describe a usted en este momento?

AGENCIA

Agencia y desarrollo,

reproducción de la

estructura,

transformación

44. ¿Cómo vive ahora?

45 ¿De qué cosas (a nivel económico y en cuanto a

responsabilidades se encarga en su hogar?

46. ¿Quién toma la mayor parte de las decisiones en su hogar?

47. ¿Cuáles de esas responsabilidades a nivel económico

puede suplir con lo que recibe a través de su unidad

productiva?

48. ¿Su participación en estos proyectos le ha permitido

ingresar a otros espacios en los que usted no había

participado? De ser así ¿Cuáles son?

49. ¿En qué consiste su participación en estos espacios?

50. ¿Hace parte de alguna organización de víctimas en este

momento?

51. En caso de ser afirmativa la anterior respuesta ¿En qué

consiste su participación en esta?

52. ¿Por qué vio importante su participación en la

organización?

53. ¿Está conforme con la oferta que tiene la ciudad para

atender a las víctimas?

54. ¿Qué dificultades enfrenta en este momento?

55. ¿De qué estrategias se vale para superarlas?

56. ¿Con quién cuenta en este momento para superar los

obstáculos que encuentra?

57. ¿Cuáles son sus redes de apoyo?

58. ¿Cree que el proyecto ha cambiado en algo su visión de si

mism@?

59. De ser así ¿En qué?

60. ¿Qué cosas de las que hacía antes ha dejado de hacer

después de participar en el proyecto y que cosas nuevas ha

empezado a hacer?

61. ¿Cuáles han sido desde su punto de vista los principales

aportes del proyecto en su vida?

Page 62: SENTIDOS DE LA VICTIMIZACIÓN Y AGENCIA DE LAS VÍCTIMAS

59

7.3. ANEXO 3: Guía de entrevistas a funcionarios públicos unidad municipal de atención y

reparación a víctimas

Dependencia: Línea de restablecimiento

Autonomía Económica

Preámbulo:

Esta entrevista busca acceder al conocimiento específico de los funcionarios (as) involucrados (as)

en la formulación o implementación de los proyectos de Fortalecimiento a Unidades Productivas

y Estrategias de Comercialización implementados por la Administración del Municipio de

Medellín durante el periodo 2012-2015, así como sus vivencias y experiencias sobre los mismos.

Con el fin de hacer de esta entrevista una experiencia valiosa y satisfactoria para las partes, se debe

tener en cuenta:

La grabación de la entrevista constituye el medio ideal para el análisis de la información

en la presente investigación, pues evita la tergiversación de la información suministrada y

permite un diálogo libre y espontáneo durante su desarrollo. Por esta razón, solicito

respetuosamente su respectiva autorización para la utilización de este medio.

Toda la información obtenida en esta entrevista tendrá un manejo estrictamente

confidencial y anónimo, y será utilizada exclusivamente por la investigadora del proyecto

para los fines antes descritos. No tiene carácter de evaluación del proceso.

Dado el carácter libre y voluntario de la entrevista, la persona puede interrumpir el curso

de la misma o responder selectivamente las preguntas planteadas cuando encuentre motivo

para ello.

La entrevista se iniciará sólo en el momento en que el facilitador considere que las

condiciones están dadas para hacerlo y tendrá una duración aproximada de una hora.

Entrevista:

Información general:

1. Datos generales del entrevistado: Nombre, dependencia en la que trabaja.

Información específica:

1. ¿Qué pasaba en Medellín en materia de atención a víctimas al momento que inició el proyecto?

2. ¿De dónde surgió esta iniciativa?

3. ¿Qué actores la impulsaron desde el principio (funcionarios, organizaciones de víctimas)?

4. ¿Por qué bajo la línea de fortalecimiento?

5. ¿Había alguna experiencia previa?

6. ¿Qué aprendizajes se retomaron de allí para el diseño de la nueva?

7. ¿Cómo se inició el proceso de diseño?

8. ¿Hubo alguna metodología orientadora?

9. ¿En qué espacios se construyó?

10. ¿Bajo qué supuestos se diseñó el programa?

11. ¿Bajo qué visión de víctimas se diseñó el programa?

12. ¿Bajo qué visión de fortalecimiento se inició el programa?

13. ¿Hubo alguna participación de víctimas o de sociedad civil en el diseño?

Page 63: SENTIDOS DE LA VICTIMIZACIÓN Y AGENCIA DE LAS VÍCTIMAS

60

14. ¿Hubo alguna asesoría externa?

15. ¿Desde qué experiencia venían las personas que trabajaron en el diseño y qué aportes tuvieron en

la concepción del programa?

16. ¿Qué líneas se establecieron para la acción del programa?

17. ¿Cuáles fueron los objetivos y cómo se definieron?

18. ¿Por qué se priorizaron esas líneas y no otras?

19. ¿Cómo fue el proceso de definir la estrategia?

20. ¿Quienes participaron en dicha definición?

21. ¿Cómo se definió la población objetivo y las zonas de influencia?

22. ¿Cómo fue la puesta en marcha?

23. ¿Se articuló con otro programa?

24. ¿Cuáles eran las expectativas iniciales del proyecto?

25. ¿Cambiaron de alguna forma durante la puesta en marcha?

26. Cuales han sido los aprendizajes tempranos del proyecto

27. ¿Qué implicaciones ha tenido el proyecto?

28. ¿Con qué dificultades se ha encontrado el proyecto?

29. Desde su punto de vista, ¿Cuáles han sido los mayores aportes del proyecto para el restablecimiento

de las víctimas?

Page 64: SENTIDOS DE LA VICTIMIZACIÓN Y AGENCIA DE LAS VÍCTIMAS

61

7.4. ANEXO 4: Cuadro de categorías analíticas

Cuadro de Categorías analíticas

Concepto Categoría analítica Temas

Sujeto víctima

Sujeto sufriente y sacrificado

Sentidos de la victimización

reforzados (visiones

estereotipadas, sentidos

hegemónicos o contra

hegemónicos)

Sujeto marcado

Sujeto colectivo

Sujeto con derecho y político

Sujeto reparado

Estructura

Sentidos hegemónicos de la victimización

(DDHH, justicia transicional, reparación)

Dualidad de la estructura (Reglas,

recursos, hábitos, ampliación de

libertades y capacidades)

hábitos asociados a la victimización

Oportunidades-Recursos: acceso mercado

laboral y productivo

Oportunidades-Recursos: Acceso a

derechos y Reparación.

Agencia y

desarrollo humano

Poder ejercido

Agencia y desarrollo,

reproducción de la estructura,

transformación

Escenarios de expresión de poder

prácticas situadas (Estratégica, cotidiana,

personal o política)

Cambios en modos de vida

Prácticas de transformación

Construcción de sentidos y cambios de

hábitos

Nuevos marcos y posibilidades de acción

Page 65: SENTIDOS DE LA VICTIMIZACIÓN Y AGENCIA DE LAS VÍCTIMAS

62

7.5. ANEXO 5: Cuadro de trayectorias de las víctimas TRAYECTORIAS DE LAS VÍCTIMAS Y EXPERIENCIA DE PARTICIPACIÓN EN EL PROYECTO

Nombre Edad Características

familiares

Tipo de

victimización

Unidad creada o

fortalecida/experienci

a productiva

Tipo de

Unidad

Cómo y cuándo se

insertó en el

proyecto.

Experiencia según fases del

proceso

Inserta en la

estrategia Crisálidas

Participación

en otros

programas de

víctimas

Eugenia 53

años

Madre soltera,

tres hijos

Desplazamiento

forzado intraurbano

generado por

grupos paramilitares,

desde la comuna

13 de la ciudad de Medellín. Eugenia

se desplazó a otro

barrio de la ciudad, junto con

sus hijos por temor

a que se materializaran

amenazas

realizadas en contra de uno de

sus hijos. Esto

ocurrió de manera posterior al

asesinato de su

hijo mayor por parte de grupos

paramilitares

presentes en el territorio.

Unidad fortalecida,

experiencia productiva previa con

microempresa familiar

de arepas en el barrio San Javier de la comuna

13 de Medellín. .

Gastronómic

a: Venta de arepas.

Su proyecto venía

siendo fortalecido desde el año 2009.

Ha sido fortalecida

tres veces (año 2009, 2011 y 2013)

Identificada a través de su

participación en procesos de la UARIV. Su reconocimiento en estos

espacios le permitió llegar a través

del contacto con la líder del programa de Autonomía Económica

para el año 2009; Asistencia a varias

actividades de capacitación en temas de mercadeo, emprendimiento y en la

construcción de planes de negocios.

Argumenta haber recibido un acompañamiento continuo por parte

de los funcionarios de la UMARV,

quienes además de asesorarla acerca de las rutas para insertarse en el

proceso, han cumplido un papel

fundamental como clientes de su UP. Ha recibido asesoría en el proceso de

compra de insumos para su negocio y

ha recibido tres desembolsos de manera individual y colectiva (en UP

generadas con otras personas). Sin

embargo, para la fecha en que fue entrevistada no podía recibir más

desembolsos por parte de la Unidad,

así que el acompañamiento de la misma estaba supeditado al apoyo

con la promoción y compra de sus

productos.

Puesto que por las

condiciones de ejecución del

programa, su UP no

podía seguir siendo fortalecida a través de

desembolsos, el

acompañamiento siguió brindándose a

través de la inserción

de la misma en la estrategia Crisálidas.

Esta inserción ocurre

por voluntad de la líder del programa de

Autonomía

Económica, sustentada bajo los

criterios de

comercialización. Eugenia participa

activamente de ferias

con el fin de promocionar sus

productos.

Talleres de

formación para el

acompañamient

o emocional a víctimas del

conflicto

armado con ACNUR,

participación

en espacios para generar

propuestas para

la Ley de Víctimas con la

"UARIV",

participación en

organizaciones

de víctimas (ASODEAM)

Patricia 44

años

Madre soltera,

dos hijos

Desplazamiento

forzado

intraurbano, por

grupos

paramilitares

presentes en la comuna 13 de la

ciudad de

Medellín. El Desplazamiento

obedeció a

Unidad fortalecida,

experiencia productiva

previa con

microempresa de

confecciones en su

casa, en la comuna 13 de la ciudad de

Medellín.

Microempre

sa de

confecciones

Unidad productiva

fortalecida en el

año 2011

Llegó al programa por referencia de

su hijo, quien también había recibido

un fortalecimiento a través del

programa de Autonomía Económica.

Su contacto inicial fue la líder, para

ese momento, del programa, quien la visitó en su casa. Recibió

capacitaciones en costos, mercadeo y

en desarrollo de planes de negocios y posteriormente un desembolso con el

que adquirió insumos para su UP,

Por las características

de su negocio, no ha

sido convocada para

ser parte de la

estrategia Crisálidas.

Sin embargo, a través de su contacto con el

programa de

Autonomía Económica, ha

recibido orientación

De manera

previa a su

participación

en estos

proyectos,

Eugenia había participado en

procesos de

capacitación ofrecidos por el

SENA donde se

Page 66: SENTIDOS DE LA VICTIMIZACIÓN Y AGENCIA DE LAS VÍCTIMAS

63

amenazas

realizadas a su hijo, que la

motivaron a

trasladarse del lugar con su hijo y

su hija.

tales como: maquina plana, maquina

familiar, cortadora y telas.

para participar en

otros escenarios que le han permitido un

mayor

fortalecimiento de su UP como Capital

Semilla. Para la fecha

de la entrevista, Patricia hacía un

balance positivo del

fortalecimiento que le había permitido

avanzar en otras

condiciones como

generar empleo y

tener su propio local

de ventas de uniformes para el

área de la salud.

priorizaba el

acceso de la población

desplazada. De

manera simultánea a su

participación a

los proyectos en mención,

participó en

programas como Capital

Semilla a través

de los cuales

obtuvo recursos

para su UP.

Beatriz 64 años

Madre soltera, un hijo

Desplazamiento rural-urbano,

desde el municipio

de Apartadó hacia la ciudad de

Medellín. El

desplazamiento fue percibido por

su núcleo familiar

próximo (padres y hermanos) y

obedeció a

amenazas contra los integrantes de

su familia,

generadas por grupos guerrilleros

presentes en la

zona.

Beatriz no contaba con una UP al momento de

empezar a hacer parte

del proyecto. Su experiencia productiva

estaba encaminada a la

sobrevivencia, lo que la había llevado a vender

dulces y comida en las

afueras de los colegios y en las calles para

responder a sus

necesidades cotidianas y las de su hijo. Sin

embargo, recibía

continuamente el apoyo económico de su

familia. Sin embargo,

en este proceso fue afinando e innovando

en la elaboración de

obleas, potencial identificado por el

programa de

Autonomía Económica, que apoyó la creación

de esta UP.

Gastronómica: Venta de

obleas

Unidad productiva fortalecida en el

año 2012

Llegó al programa a través de contactos a través de un político,

quien al conocer su producto le

recomendó remitirse al programa de Autonomía Económica de la Unidad.

Lo particular de la trayectoria de

Beatriz, es que esta nunca se identificó como víctima ni accedió a

espacios institucionales pensados

para ella. Por esta razón, los trámites para su reconocimiento como

desplazada ocurren como un medio

para cumplir el requisito de participación en los proyectos en

mención.

Beatriz se encuentra inserta en la

estrategia Crisálidas

por criterio de los funcionarios del

Programa de

Autonomía Económica de la

UMARV. Para la

fecha de la entrevista, contaba con un

puesto de venta

localizado en la Unidad de Atención y

Orientación (UAO)

del barrio belencito de la ciudad de

Medellín, espacio

ofrecido mediante la estrategia Crisálidas.

Ana 62 años

Casada, madre de tres hijos

Desplazamiento forzado rural-

urbano, desde el

Urabá antioqueño

A pesar de que Ana se ocupaba en el contexto

de desplazamiento de

atender su propio

Gastronómica: Venta de

chocolates

artesanales

Unidad productiva fortalecida en el

año 2014

Ana, describe este momento, así: "Hubo un año en que la ayuda

humanitaria no me llegaba, y me

dijeron: ´vaya a tal lugar´, fui

Ana se encuentra inserta dentro de la

estrategia Crisálidas.

Allí promociona y

Page 67: SENTIDOS DE LA VICTIMIZACIÓN Y AGENCIA DE LAS VÍCTIMAS

64

a la ciudad de

Medellín. Ana se desplazó

inicialmente sola

con sus hijos, pues su esposo decidió

continuar

habitando el contexto del

desplazamiento en

función de proteger su

negocio y sus

tierras. Ana se

desplazó por el

temor a que

grupos de procedencia

desconocida de la

zona hicieran efectivas

amenazas contra

su familia por considerarlos

ayudantes de

grupos guerrilleros de la zona.

negocio de comidas, en

el contexto receptor trabajó como empleada

del servicio en casas de

familia para garantizar el sostenimiento de sus

hijos. Posteriormente,

empezó a idear adaptarse a otras

estrategias de

sobrevivencia como la venta de helados en las

calles de la ciudad. En

este devenir, Ana

empezó a fabricar

chocolates y venderlos

en las tiendas y en las calles, lo que le

permitió innovar e ir

construyendo nuevas ideas sobre su producto.

Ana nunca se identificó

como víctima y accedió a espacios

institucionales de

atención por información que le

llegaba a través de

personas que iba

conociendo en la

medida en que promocionaba sus

chocolates. De esta

manera, una vez fue informada sobre la

posibilidad de una

"ayuda humanitaria" empezó a insertarse en

espacios institucionales

para las víctimas de la ciudad.

allá pero lleve un chocolate porque

yo ando con la bolsita de mis chocolates. Llegue y la primera

persona que me encontré fue a la

doctora Olga (líder del programa de Autonomía Económica) y le dije

´señora “ yo vendo unos

chocolaticos muy ricos, usted me puede colaborar?´, y me dijo

´muestra´, se lo mostré y me

dijo, “esto está muy bonito y está muy bueno´, ´vaya

donde fulana que ella la va anotar

para un fortalecimiento´. Y me

anotaron y como al mes me llamaron

y me

dieron 2 millones de pesos…".

vende sus productos

en algunas ferias ofrecidas a través de

la misma. De igual

manera, argumenta que los funcionarios

del programa de

Autonomía Económica se

constituyen en los

principales clientes de sus productos.

Silvia 35

años

Soltera, vive

con sus padres

y su hermano.

Desplazamiento

forzado

intraurbano, desde el barrio San

Javier de la

Comuna 13 de la ciudad de

Medellín al

corregimiento San

La UP de Silvia fue

fortalecida. Dicha

Unidad nació por el conocimiento que fue

adquiriendo a través de

sus estudios en fabricación de

artesanías en el SENA.

Esto le permitió

Unidad productiva

fortalecida en el

año 2014

Silvia llega al proyecto de

fortalecimiento a UP por referencia

del Secretario de Inclusión Social de la ciudad, con quien había tenido una

relación próxima porque a través de

esta secretaría Silvia participaba en proyectos para la población

discapacitada. Silvia describe este

proceso inicial, así: "Fui a buscar a la

Silvia como persona

en condición de

discapacidad ha tenido gran

participación en

proyectos generados por la Secretaría de

Inclusión Social para

esta población.

Page 68: SENTIDOS DE LA VICTIMIZACIÓN Y AGENCIA DE LAS VÍCTIMAS

65

Cristóbal. Silvia

cuenta con una condición de

discapacidad

debido a un accidente

experimentado a

sus 14 años.

adquirir experiencia

para trabajar en proyectos de la Alcaldía

de Medellín como

tallerista en programas para personas con

discapacidad mental,

trabajo en el que se desenvuelve por dos

años. En este contexto,

a partir del año 2008, Silvia empieza con la

elaboración de

artesanías y a buscar

espacios para

promocionar sus

productos.

líder de Autonomía Económica y me

presenté: ´Soy víctima del conflicto armado, soy artesana y me

dijeron que aquí hay un programa

para esta población´, y ella encantada me empezó a preguntar sobre mi

producto. Fueron a mi casa a

cerciorar, allá tengo mi taller tomaron fotos, vieron toda mi

casa…entonces ya empecé con ellos,

esa misma semana hubo una feria que fue arriba en

el museo de la memoria y allá me fue

muy bien. Yo pensé que me iban a

decir lo de siempre: “nosotros te

llamamos o ´nosotros te avisamos´, o

´estamos llenos´"

Andrés 26

años

Vive con su

pareja

sentimental

Desplazamiento

forzado

intraurbano generado por

amenazas de

"grupos armados" contra su vida y su

grupo musical. Se

desplaza con su grupo musical, su

mamá, su hermana

y su compañera sentimental.

Andrés se desempeñaba

como cantante de rap y

participaba activamente de espacios educativos

en formación musical

para niños.

Estudio de

producción

musical

Recibió dos

fortalecimientos en

diferentes años, uno individual y

uno colectivo. El

acceso al fortalecimiento en

diferentes

categorías obedeció a que el

fortalecimiento a

nivel colectivo no tuvo continuidad y

sostenibilidad en el

tiempo. Posteriormente,

Andrés recibió un

fortalecimiento individual donde la

responsabilidad por

el sostenimiento del estudio de

grabación se

encontraba soportado

únicamente en él.

Llegó al programa por referencias de

conocidos a través de su experiencia

de trabajo en la fundación "Pasolini". Andrés se remitió a la UMARV por

recomendación de conocidos de este

lugar y allí recibió información sobre el programa de fortalecimiento a UP.

Posteriormente, recibió una visita

diagnóstica por parte del programa de Autonomía Económica y como

requisito para acceder al

fortalecimiento tuvo que cumplir con un proceso de capacitación en planes

de negocio. Recibió continua

asesoría individual tanto en la administración de su unidad

productiva

Por las características

de su UP, no se

encuentra inserto en la estrategia

Crisálidas

Fuente: Elaboración propia a partir de información obtenida en trabajo de campo

Page 69: SENTIDOS DE LA VICTIMIZACIÓN Y AGENCIA DE LAS VÍCTIMAS

66

7.6. ANEXO 6: Ruta metodológica de los proyectos analizados Ruta metodológica de los proyectos analizados

PROYECTO DE

FORTALECIMIENTO

A UNIDADES

PRODUCTIVAS

Criterios de selección de la

población

Fases del proceso

Familias victimas de desplazamiento forzado

incluidas en el Registro

Único de Victimas (RUV), que residan en Medellín y se

encuentren en proceso de

superación de condiciones de vulnerabilidad.

· Tener Unidad Productiva

(UP) con un año mínimo de funcionamiento

· Si la UP va a fortalecerse

solo puede haber recibido una vez recursos de la

Unidad Municipal de

Victimas. Si la UP va a crearse se

requiere:

· Que la víctima solicitante tenga visión y vocación

emprendedora,

disponibilidad de tiempo para trabajar el negocio, una

idea clara y viable de

negocio según demandas del mercado y de conformidad

con el diagnóstico

empresarial y plan de negocio.

· Ya sea que la UP vaya a

crearse o ser fortalecida solo se apoyan negocios en la

ciudad de Medellín.

Fase 1. Identificación de las familias: se establece atendiendo a los criterios definidos anteriormente y, a partir de bases de datos suministradas por los

componentes de la Unidad Municipal de Atención y Reparación a Víctimas y otras

entidades como Sena, Medellín Solidaria, UARIV, DPS, ISVIMED, Secretaria de las Mujeres, Unidad de Seguridad Alimentaria, así como en los recorridos territoriales

donde se identifican familias incluidas en el RUV con unidad productiva en

funcionamiento. Fase 2. Visita domiciliaria de diagnóstico: Se realiza con el fin de aplicar los

siguientes instrumentos de diagnóstico (anexos): Caracterización socioeconómico, perfil empresarial y perfil ocupacional. La visita también permite verificar in-situ el

estado del emprendimiento, cuando lo haya.

Fase 3. Análisis de los instrumentos de diagnóstico; es posterior a la aplicación de

los instrumentos detallados en el punto anterior y busca aportar una lectura

pormenorizada –individual y de conjunto- de la situación socioeconómica de las

familias que aspiran ingresar al proceso, las características del negocio, así como los

conocimientos, competencias y habilidades del emprendedor(a).

Fase 4. Proceso de formación: este proceso implica 10 talleres de formación en

contabilidad, mercadeo, administración, proyecto de vida, género, organización para

el trabajo, oferta educativa y empleabilidad, legislación vigente para víctimas y rutas de acceso a derechos.

Fase 5. Asesoría individual: se adelanta con el fin de acompañar a él o la emprendedora en la construcción del plan de negocios y/o plan de inversión al cual se

anexan las cotizaciones, RUV, fotocopia de la cédula, Acta formal de entrega, acta de

compromiso, diagnóstico empresarial, perfil ocupacional y demás documentación que dé cuenta del proceso.

Fase 6. Acto simbólico de cierre: es un espacio de encuentro colectivo adelantado con los y las participantes del proceso, con la finalidad de visibilizar la contribución

de cada emprendedor/a y su determinación en lograr una inversión rentable. El acto

pretende ser un sello de compromiso individual y colectivo e incluye entrega de certificado de participación.

Fase 7. Desembolso: las unidades productivas creadas o fortalecidas reciben un

recurso económico que se define en el Plan de Desarrollo municipal. Este recurso se

entrega directamente a la persona titular (Jefe de Hogar) en el RUV; cuando él o la participante del proceso no es titular, si no otro miembro del núcleo familiar, está

última podrá participar del proceso y recibir el recurso económico UNICAMENTE

CON AUTORIZACIÓN escrita validada ante notario, donde consta que voluntariamente el titular cede el recurso a otro miembro del grupo familiar registrado

en el RUV.

Fase 8. Acompañamiento a compras: tiene el propósito de garantizar que el recurso

se invierta de acuerdo con el plan de negocios o el plan de inversiones desarrollado conjuntamente con cada emprendedor/a. Las compras se adelantan previa

identificación de proveedores que se seleccionan en discusión reflexiva con el grupo

de emprendedores.

Fase 9. Seguimiento a las unidades: se realiza posterior a la inversión con el

objetivo de identificar avances y dificultades que puedan afectar la sostenibilidad del

negocio y generar acciones que oportunamente permitan aprovechar oportunidades

y/o contener amenazas.

Ruta estrategia de

comercialización

Crisálidas

Emprendiendo Sueños

En este proceso busca

integrar a los emprendedores y emprendedoras a las

dinámicas del mercado actual

Fase 1. Identificación de las familias: Se hace a través de remisiones realizadas por

los diferentes componentes de la Unidad Municipal de Atención y Reparación a Victimas e instituciones como DPS, UARIV, Medellín Solidaria, Secretaría de La

Mujer entre otras.

Page 70: SENTIDOS DE LA VICTIMIZACIÓN Y AGENCIA DE LAS VÍCTIMAS

67

que logren comercializar sus

productos y buscar mayores oportunidades a través de

formación, participación en

ferias, ruedas de negocio, eventos de ciudad,

intercambios de experiencia,

encuentros académicos.

Fase 2. Elaboración de la ficha técnica: Se realiza una entrevista individual con

cada emprendedor/a donde se evidencia cuáles son los productos que ofrece el emprendedor y el nivel de calidad del producto, capacidad de producción, precios,

experiencias de comercialización, dificultades o necesidades del emprendedor. Todo

lo anterior se registra en una ficha técnica por líneas Confección, Alimentos, Artesanías, Agroecología. Se realiza un registro fotográfico de los productos. Las

personas que muestran avances en el proceso y calidad en el producto son enviadas al

equipo de comunicaciones que administra la página Web, para que sus productos sean ofertados en ella.

Fase 3. Construcción base de datos: Se registran por línea comercial, incluyendo

nombre, cédula, datos de contacto, dirección, teléfono, comuna, productos que

comercializa y el listado general de los productos principales.

Fase 4. Proceso de formación: Lograr que los emprendedores mejoren sus

capacidades comerciales y de producción para poder competir en los diferentes

espacios de comercialización del mercado actual tanto a nivel local, municipal, nacional e internacional, dentro del proceso de formación los temas que abordados

son: mercadeo y publicidad, costos y precios, empaque, proceso de producción,

tiempos, servicio al cliente, proyecto de vida y se transversaliza la atención Psicosocial y jurídica. El proceso de formación se hace de forma práctica participando

en las diferentes estrategias para así evaluar el conocimiento adquirido, dificultades y

avances en la práctica. El proceso de formación se realiza en nivel inicial para las personas nuevas y en un

nivel avanzado y práctico para las personas que vienen de años anteriores.

Fase 5. Estrategia de comercialización: En las diferentes estrategias de

comercialización cada emprendedor realiza una muestra y venta de sus productos. Para la participación en los eventos se seleccionan según el tipo de unidad productiva,

el tipo de mercado y las necesidades de los clientes.

Fase 6. Evaluación semestral: Se realiza trimestralmente a través conversatorios donde se exponen los diferente avances, dificultades, logros, teniendo en cuenta la

participación de los eventos, el producto, la atención de cada emprendedor, esto con el

fin de mejorar la estrategia y buscar ser más competitivos en los futuros eventos.

Fuente: Elaboración propia a partir de lo contenido en Alcaldía de Medellín (2013b).