seneca fraces celebres

3
Séneca 2 AC-65. Lucio Anneo Séneca. Filósofo latino. La mayor rémora de la vida es la espera del mañana y la pérdida del día de hoy. En tres tiempos se divide la vida: en presente, pasado y futuro. De éstos, el presente es brevísimo; el futuro, dudoso; el pasado, cierto. Importa mucho más lo que tú piensas de ti mismo que lo que los otros opinen de ti. Un hombre sin pasiones está tan cerca de la estupidez que sólo le falta abrir la boca para caer en ella. No nos atrevemos a muchas cosas porque son difíciles, pero son difíciles porque no nos atrevemos a hacerlas. La ira: un ácido que puede hacer más daño al recipiente en la que se almacena que en cualquier cosa sobre la que se vierte. El lenguaje de la verdad debe ser, sin duda alguna, simple y sin artificios. Largo es el camino de la enseñanza por medio de teorías; breve y eficaz por medio de ejemplos. La amistad siempre es provechosa; el amor a veces hiere. La tristeza, aunque esté siempre justificada, muchas veces sólo es pereza. Nada necesita menos esfuerzo que estar triste. No hay nadie menos afortunado que el hombre a quien la adversidad olvida, pues no tiene oportunidad de ponerse a prueba. ¿Preguntas qué es la libertad? No ser esclavo de nada, de ninguna necesidad, de ningún accidente y conservar la fortuna al alcance de la mano. El que no quiera vivir sino entre justos, viva en el desierto. El primer arte que deben aprender los que aspiran al poder es el de ser capaces de soportar el odio.

Upload: miguel-angel-espinoza

Post on 28-Jan-2016

213 views

Category:

Documents


0 download

DESCRIPTION

Fraces Celebres del Filosofo romano Lucio Anneo Séneca

TRANSCRIPT

Page 1: Seneca Fraces Celebres

Séneca 2 AC-65. Lucio Anneo Séneca. Filósofo latino.

La mayor rémora de la vida es la espera del mañana y la pérdida del día de hoy.

En tres tiempos se divide la vida: en presente, pasado y futuro. De éstos, el presente es brevísimo; el futuro, dudoso; el pasado, cierto.

Importa mucho más lo que tú piensas de ti mismo que lo que los otros opinen de ti.

Un hombre sin pasiones está tan cerca de la estupidez que sólo le falta abrir la boca para caer en ella.

No nos atrevemos a muchas cosas porque son difíciles, pero son difíciles porque no nos atrevemos a hacerlas.

La ira: un ácido que puede hacer más daño al recipiente en la que se almacena que en cualquier cosa sobre la que se vierte.

El lenguaje de la verdad debe ser, sin duda alguna, simple y sin artificios.

Largo es el camino de la enseñanza por medio de teorías; breve y eficaz por medio de ejemplos.

La amistad siempre es provechosa; el amor a veces hiere.

La tristeza, aunque esté siempre justificada, muchas veces sólo es pereza. Nada necesita menos esfuerzo que estar triste.

No hay nadie menos afortunado que el hombre a quien la adversidad olvida, pues no tiene oportunidad de ponerse a prueba.

¿Preguntas qué es la libertad? No ser esclavo de nada, de ninguna necesidad, de ningún accidente y conservar la fortuna al alcance de la mano.

El que no quiera vivir sino entre justos, viva en el desierto.

El primer arte que deben aprender los que aspiran al poder es el de ser capaces de soportar el odio.

El colmo de la infelicidad es temer algo, cuando ya nada se espera.

Si me ofreciesen la sabiduría con la condición de guardarla para mí sin comunicarla a nadie, no la querría.

Igual virtud es moderarse en el gozo que moderarse en el dolor.

¡Estudia! No para saber una cosa más, sino para saberla mejor.

Teméis todas las cosas como mortales y todas las deseáis como inmortales.

No es pobre el que tiene poco, sino el que mucho desea.

Page 2: Seneca Fraces Celebres

Mostrarse asustado sin motivo aparente es dar a conocer que se tiene razón de temer.

El trabajo y la lucha llaman siempre a los mejores.

El hombre más poderoso es el que es dueño de sí mismo.

No os espante el dolor; o tendrá fin o acabará con vosotros.

Lo que has de decir, antes de decirlo a otro, dítelo a ti mismo.

Nuestra naturaleza está en la acción. El reposo presagia la muerte.

La vida es como una leyenda: no importa que sea larga, sino que esté bien narrada.

Los que saben mucho se admiran de pocas cosas, y los que no saben nada se admiran de todo.

Estar en ocio muy prolongado, no es reposo, es pereza.

No hay cosa más fuerte que el verdadero amor.

Existe el destino, la fatalidad y el azar; lo imprevisible y, por otro lado, lo que ya está determinado. Entonces como hay azar y como hay destino, filosofemos.

No existe ningún gran genio sin un toque de demencia.

En la adversidad conviene muchas veces tomar un camino atrevido.

No podemos evitar las pasiones, pero si vencerlas.

No es preciso tener muchos libros, sino tenerlos buenos.

El fuego prueba el oro; la miseria los hombres fuertes.

Sin estudiar enferma el alma.

La esclavitud más denigrante es la de ser esclavo de uno mismo.

Gran parte de la bondad consiste en querer ser bueno.

A vivir se aprende toda la vida, y toda la vida se ha de aprender a morir.

Ningún descubrimiento se haría ya si nos contentásemos con lo que sabemos.

No he nacido para sólo un rincón, mi patria es todo el mundo.