sanos, fuertes y dóciles: crítica a la educación física
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Sanos, fuertes y dóciles: crítica a la educación física
Felipe Neri Rivero
Román Leyva Déciga
Fernando Torres García
―Ser profesor de educación física en una escuela de educación básica
implica realizar con los alumnos una serie de actividades muy
específicas relacionadas con el movimiento corporal, que en muchos
planteles se consideran como marginales en comparación con los
aspectos académicos del resto del curriculum‖.1 Actividad menor,
desvalorizada, a veces inexistente. Por ejemplo, en el Distrito
Federal, 1’124,229 alumnos reciben algunos aspectos de educación
física, cuando son 1’822,526 los alumnos de educación básica; esto
es, ¡sólo 61.6%! ¡y en la Ciudad de México! ¿cómo será en entidades
con mayor rezago educativo?
Además de la cobertura, también hay problemas de calidad. En un
diagnóstico reciente, se enumeran los problemas que inciden sobre la
calidad, van desde la formación de los maestros hasta las condiciones
para impartir educación física. En las escuelas normales es común la
enseñanza monótona y rutinaria; existe una gran confusión sobre el
campo de desarrollo todavía hay quien piensa que educación física y
deporte son lo mismo. El currículum es muy diverso y se aplica de
formas diferentes, las materias tampoco establecen una vinculación
Maestro en Pedagogía por la Universidad Pedagógica Nacional (UPN). Profesor de la
Escuela Superior de Educación Física (ESEF). Candidato a Maestro en Pedagogía por la Universidad Pedagógica Nacional (UPN).
Profesor de la Escuela Superior de Educación Física (ESEF). Candidato a Maestro en Pedagogía por la Universidad Pedagógica Nacional(UPN).
Profesor de la Escuela Superior de Educación Física (ESEF). 1 Programa para la Transformación y el Fortalecimiento Académico de las Escuelas
Normales. Licenciatura en Educación Física, Plan de estudios 2002. México, SEP,
Dirección General de Normatividad y Dirección General de Materiales y Métodos de la
Subsecretaría de Educación Básica y Normal, 2002, p. 21.
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con el conjunto de asignaturas del plan de estudios, lo que genera
una formación fragmentada, que acumula conocimientos sin continuidad
y sin propósitos deliberados, donde las prácticas profesionales no
existen; es casi nula la referencia a los niños y/o a los
adolescentes; se conoce poco de estrategias didácticas; la disciplina
esta desvalorizada al concebirse como una actividad eminentemente
práctica y las habilidades intelectuales no constituyen un eje
formativo importante. "En conclusión, el conocimiento teórico que se
enseña, la práctica motriz que se realiza y la competencia didáctica
que se trata de lograr; no constituyen un cuerpo de conocimiento
interrelacionado".2
En las prácticas físicas de preescolar, primaria y secundaria,
sobresale el enfoque de mando directo, más propio de
acondicionamiento físico o del entrenamiento, que de actividades
educativas. Como disciplina, la educación física se mantiene alejada
del currículo de educación básica; los maestros se vinculan sólo con
los padres de familia de los alumnos seleccionados por sus destrezas
deportivas, o de aquellos que integran la escolta de la escuela, y
prácticamente nada con el resto; tienen tiempos reducidos —una o dos
sesiones a la semana—; falta precisión en sus propósitos y escasa
pertinencia de sus métodos; cuenta con pocos profesores y en
ocasiones es atendida por docentes que tienen otra formación
profesional; los espacios son inadecuados, los materiales deportivos
muy exiguos. Por último, el maestro de educación física es visto como
un técnico menor, responsable de la preparación de ceremonias
2 Idem. p. 18.
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escolares, de la disciplina en la escuela o de la vigilancia en el
recreo.
Los problemas de cobertura y de calidad han motivado una
reflexión crítica sobre el estatuto de la educación física en el
currículo de educación básica. Se ha cuestionado su pertinencia,
viabilidad y hasta su historia. Es un debate abierto, pero que ya ha
tenido avances, como la reforma de los contenidos, los cambios en la
formación de los docentes, la redefinición de las prácticas
educativas, la atención a la cobertura; sin embargo sigue en disputa
lo central: su utilidad en la formación de sujetos educativos.
La reforma es una toma de posición crítica y positiva. Las
críticas provienen de muchas partes: de los educadores físicos, en el
cuestionamiento de su quehacer cotidiano, de su marginación y su
futuro (Sur, 22 de junio de 2002); de las autoridades escolares, por
la insuficiencia de recursos; de los niños y padres de familia, por
prácticas costosas y ceremonias grandilocuentes. Se trata de una
crítica profunda. Ha servido para hacer denuncias y emprender
reformas. Los cambios propuestos van desde la revisión de los
programas a los montos presupuestales para la formación de los
docentes, de las prácticas educativas y de los modelos pedagógicos
hasta el gobierno del cuerpo de los niños. Es una crítica radical. No
sólo de los aspectos puntuales, sino de lo que podría considerarse el
modelo general de educación física, con sus objetos y objetivos, sus
materias y procedimientos, las técnicas y los métodos de enseñanza.
Los reformadores han cuestionado su propia historia, han ido
hacia atrás con el fin de rastrear los orígenes de la educación
4
física, las fases de su desarrollo y transformación, la conformación
de diversos modelos del gobierno del cuerpo de los niños, modelos
cada vez más complejos y que han cuestionado en su utilidad y
significación. Ha sido un largo e inacabado proceso crítico de su
actividad y su profesión, pero también productivo, porque de las
interrogantes ha despuntado una reorientación programática, un cambio
en la educación física mexicana.
Es esta reforma dual, crítica y positiva, la que queremos exponer
aquí, es aunque sea de manera breve. El texto se divide en tres
apartados. En el primero destacamos los momentos constitutivos de la
educación física; en el segundo, nos interrogamos sobre la utilidad y
viabilidad de este conjunto técnico y pedagógico que tiene como
centro el cuerpo de los niños; en el tercero, reseñamos los aspectos
básicos de la reforma de la educación física.
La constitución de la educación física: el modelo higiénico-deportivo
La validez de la educación física como materia de enseñanza no hay
que buscarla en discursos epistémicos, sino en finalidades más
prácticas, de carácter secular, como aparece en los planes y
programas de la Secretaría de Educación Pública (SEP) (Diario de
Yucatán, 1 de septiembre de 2002), sobre todo aquellos destinados al
cuidado de la salud de los escolares y la práctica deportiva.
La cruzada por la salud de los niños
Las escuelas y los sistemas educativos fueron creados para responder
a los desafíos emergentes de un determinado período histórico,
situado entre el siglo XVIII y XIX. El resultado fue la escuela
5
obligatoria y gratuita para todos, eslabonada en circuito único a
través del cual todos llegaran a tener la misma educación. Proyecto
liberal, que supuso la docencia como profesión, entendida como una
práctica de habilidades normalizadas que se ejercen en el seno de una
configuración institucional burocrática y jerarquizada.
Esas habilidades consisten en prácticas pedagógicas rutinarias,
en un conjunto de tecnologías existentes y masificables: los
programas institucionales de las escuelas. Así, por ejemplo, ante los
efectos del desarrollo urbano e industrial, la explotación del
trabajo de los niños y la fragilidad moral y física de los
ciudadanos, el estado se preocupó por crear respuestas específicas a
problemas concretos de la salud comunitaria.3
En este marco aparece la necesidad de especialistas con una
visión razonada sobre el cuerpo de los individuos, para preservar la
salud de la población. Los maestros de educación física fueron
algunos de estos especialistas, responsables en las escuelas, de la
vigilancia de la salud y la enfermedad de los niños desde su más
tierna infancia. Fueron los responsables, también, del diseño y la
elaboración de un conjunto de herramientas para la prevención y el
control de la salud: higiene, primeros auxilios, protección civil,
evaluación físico-médica de las poblaciones.
Diversas prácticas médicas, entre ellas las ortopédicas,
coadyuvaron a que desde finales del siglo XVIII se construyeran los
procedimientos terapéuticos y las técnicas elementales para crear una
gimnasia médica que se preocupaba más por enderezar y ajustar los
3 Ian Hunter. Repensar la escuela. Subjetividad, burocracia y crítica. Barcelona,
Editorial Pomares-Corredor, 1998, pp. 18-19.
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cuerpos, que por desarrollar ejercicios adecuados a la edad de los
sujetos, como lo fue más tarde.
La obsesión de los ortopedistas por un cuerpo recto y bien hecho
dictaba la acción higiénica. La apariencia exterior era un reflejo de
los valores morales del individuo.
El origen semántico de la educación física no es, pues, pedagógico:
proviene de una rama de la medicina, la que atiende a los pequeños.
Este interés por los ―niños de tierna edad‖ (…) es transmisor de
saberes y de conocimientos sobre sus cuerpos, sobre sus
enfermedades, sus necesidades de desarrollo (…) Lo que aparece con
la educación física no es una práctica escolar que se esté
institucionalizando, sino cierta solicitud médica y familiar. La
educación física es del dominio privado. Semejante mutación parece
explicarse por una especie de toma de conciencia demográfica: la
sensación de una despoblación de Europa a la que se añade la
verificación –objetiva esta vez- de una excesiva mortalidad
infantil.4
La educación física nace de un conjunto de prácticas que buscan
preservar la salud del cuerpo, tanto del individuo como de las
poblaciones. La educación física empieza de manera sencilla, pobre,
entre la suciedad física y la degradación moral de las clases
menesterosas, con las técnicas de salubridad de los higienistas. A
través del cuidado del cuerpo de los niños, de las enseñanzas sobre
higiene personal, de los hábitos y costumbres adquiridos en la
escuela se buscaba regular la salud de las poblaciones. No es una
disciplina pedagógica, pero si un conjunto de técnicas que van
4 El interés por el niño lleva la marca del siglo: es un adulto en miniatura, y su
cuerpo es moldeado, modelado, (como lo atestigua el pañal y luego el corsé). La
idea que se tiene del niño va ligada a preceptos morales y biológicos. A falta de
una teoría elaborada de la gimnasia educativa es poco probable esperarse encontrar
el origen de la educación física en el siglo XVII; sólo los jesuitas la integran
como una preocupación higiénica y de mantenimiento, hacen concesiones al cuerpo
para satisfacer las exigencias del alma, las normas de la cortesía, las buenas
costumbres y la etiqueta real. Ian Hunter. Repensar…, op. cit., p. 325.
7
colonizando la escuela hasta añadirlas al currículo a finales del
siglo XIX. 5
La preocupación de los médicos para reforzar la salud de las
familias va operar un traslado de la higiene del taller, de la
salubridad de la calle y la limpieza de la ciudad, a los salones de
clase, a la escuela. La alianza médico-familia-maestro da paso a una
gimnasia escolar y a la aparición de importantes sistemas de
ejercicios graduados y seriados que, a su vez, permitieron pasar de
una educación de principios dispares a un sistema progresivo,
analizado escrupulosamente.6
Un segundo elemento es la supresión paulatina de las
restricciones impuestas por la etiqueta, contra la que se alzaron los
médicos.7 Son los galenos los que prodigaron consejos de higiene y de
prevención, dedicados a las madres de familia. Preconizaron el
retorno a la naturaleza apoyándose en el ejemplo de vida sana de los
campesinos, los que sabían cómo proteger al niño de una muerte
precoz, e invitaron a devolverle su libertad de movimiento. Dichos
consejos médicos se agruparon bajo la denominación de educación
física.
Esto no corresponde al pasado: es nuestro presente (Siglo de
Torreón, 2 de octubre de 2002). De los consejos médicos, que
5 Programa de educación física. Subsecretaría de Servicios Educativos para el
Distrito Federal, Subsecretaría de Educación Básica y Normal. México, SEP, 1994,
p. 3. 6 Carlos Cornejo Domínguez. Historia de la educación física. La educación física en
Rousseau. Madrid, Editorial Gymnos, 1988, pp. 81-109. 7 El uso del corsé era el emblema de la clase ociosa, ya que una mujer ceñida de la
cintura, no era capaz de realizar trabajos manuales, las debilitaba e inhibía el
movimiento activo, causaba daño a la cerviz volviendo doloroso el coito, afectaba
la gestación, el parto y el amamantamiento creando, así, problemas en la crianza de
los niños. Cfr. Jaques Donzelot. La policía de las familias. Valencia, Pretextos,
1998, pp. 13-48.
8
comúnmente se proponen hacer un bien, se ha pasado a la instauración
de programas institucionales que buscan evitar los males de la salud
de las poblaciones escolares.
En los contenidos actuales de educación física se contemplan los
programas de vigilancia, educación ambiental, cuidado de la salud y
emergencia escolar (El Universal, 17 de junio de 2002).
El Cuadro 1 reseña la edad, la posición en el currículo y las
campañas para las escuelas de educación básica del Distrito Federal.
De las reglas de conducta se ha pasado a los mandatos, y de ahí a las
obligaciones de estado con respecto a la salud.
Cuadro 1
Programas de salud escolar, emergencia y
educación ambiental en educación básica (1)
Programa Participación Grados de Atención
Programa para la Atención Integral de
la Salud del Escolar (PAISE) Obligatoria 2° 4° 6°
Semanas Nacionales de Salud Obligatoria 4° 6°
Semana Nacional de Salud Bucal Obligatoria 2° 4°
Clínicas-Escuela Obligatoria 1° 4° 6°
Vigilancia del Estado Nutricional Obligatoria 1° 2°
Examen Médico del Escolar Optativa 1° 2° 3° 4° 6°
Vigilancia Epidemiológica Obligatoria 3° 4° 6°
“Ver bien para aprender mejor” Obligatoria 1° 4°
Cuadro 2
Programas de salud escolar, emergencia y educación
ambiental en educación básica (Continuación)
Programa Participación Grados de Atención
Programa de Fortalecimiento de
Medidas Preventivas ante Actos
Delictivos y Siniestros en Centros
Educativos en el Distrito Federal
Optativa 1° 2° 3° 4° 5° 6°
Programa de Seguridad y Emergencia
Escolar en el Distrito Federal Obligatoria 1° 2° 3° 4° 5° 6°
Segundo encuentro de Seguridad y
Emergencia Escolar Optativa 1° 2° 3° 4° 5° 6°
Campamentos en Educación Especial Optativa 1° 2° 3° 4° 5° 6°
9
Campismo Escolar Optativa 1° 2° 3° 4° 5° 6°
Fuente: Catálogo de proyectos y servicios 2002-2003, Educación primaria.
México, SEP, 2002-2003.
El deporte como proceso cultural
El deporte es el efecto de una ruptura histórica que se produjo en
Europa durante los siglos XVIII y XIX. Inició como un pasatiempo,
que luego se extendió por todo el continente. Su finalidad: el
control de las poblaciones en aras de la productividad. Aparece
primero, hasta configurar el modelo dominante, en las escuelas de
Inglaterra, a mediados del siglo XIX, con las instrucciones de
militares y médicos infantiles, como Thomas Arnold, A. Binet y V.
Henri. Su propósito era luchar contra la "fatiga escolar" y defender
una tradición patriótica, bajo la premisa de la regeneración de la
raza.
En tanto fenómeno social de ―dimensiones planetarias‖, el
deporte legitima su presencia en la escuela, sobre todo en la
secundaria, para crear habilidades, destrezas y actitudes
particulares en los educandos. Las prácticas deportivas tienen
objetivos políticos y culturales. Tratan de estandarizar los cuerpos
y las actitudes (físicas y morales), a través de la sumisión a la
autoridad y a las normas vigentes. Este es el papel del orden, los
reglamentos, la disciplina, la ley; manifiesto en el apego a las
formas puntillosas de la gimnasia y las evoluciones de las escoltas
en los patios escolares. Actividades minuciosamente reguladas, como
un recurso para el manejo de grupo y el dominio del gesto mecánico,
que revelan el afán por reforzar el orden moral y social.
10
La representatividad y la legitimidad cultural de los ejercicios
escolares dependen menos de las prácticas que imponen, que de los
valores que esas prácticas permiten interiorizar. Son contenidos
pedagógicos ligados a objetivos políticos: formar una población
fuerte, obediente y sumisa.8
En la primaria se utiliza la iniciación deportiva como un medio
que contribuye tanto al desarrollo físico como a las cualidades
volitivas necesarias para la vida en sociedad;
socialización de los sujetos con relación a las obligaciones
respecto a los demás; de didácticas corporales específicas,
progresivas y optimizadoras; de adquisición de capacidades,
habilidades, destrezas y conocimientos para desenvolverse eficazmente
(Diario de Nuevo Laredo, 9 de noviembre de 2002). En preescolar, en
contraposición al deporte, el juego mismo es sospechoso, porque
suscita actitudes que contrarían el ejercicio del poder, tanto
político como pedagógico.
El deporte es bien visto por los directivos, por los profesores y
padres de familia como una actividad sumamente apreciada gracias a
los beneficios que reporta su práctica regular (Por Esto, 20 julio de
2002 y Diario de Monterrey, 26 de abril de 2002). Bajo esta mirada el
sistema educativo recupera los valores culturales del deporte a
través de los siguientes programas:
8 ―El doctor Schereber pensaba que los padres debían restringir la libertad de sus
hijos mediante severas disciplinas en aras de la salud: moral, mental y física.
Parecía creer que los niños son criminales o enfermos desde el principio, o que con
seguridad llegarían a serlo si no se los rescataba a tiempo [...] Inventó un
aparato llamado Scherbersche Geradhalter para obligar a los niños a sentarse
derechos. Consistía en dos barras de hierro perpendiculares sujetas a la mesa en la
que se sentaba el niño a leer o a escribir. La barra presionaba sobre las
clavículas y la parte frontal de los hombros para impedir todo movimiento hacia
delante o toda postura encorvada.” Morton Schatzman. El asesinato del alma. La
persecución del niño en la familia autoritaria. México, Siglo XXI, 1999, p. 19.
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Cuadro 3
Programas de deporte y cultura en educación básica
Programa Participación Grados de Atención
Avance Deportivo AVANDEP Optativa 4° 5° 6°
Concurso de dibujo “Juegos Escolares de
Deporte Avanzado” Optativa 3° 4° 5° 6°
Deporte y recreación para alumnos con
necesidades educativas especiales Optativa 1° 2° 3° 4° 5° 6°
Encuentro pedagógico de la clase de
Educación Física Optativa 1° 2° 3° 4° 5° 6°
Encuentro pedagógico de la clase de
Educación Física para docentes que atienden
a alumnos con necesidades educativas
especiales
Optativa 1° 2° 3° 4° 5° 6°
Exhibición de material didáctico para
Educación Física Optativa 1° 2° 3° 4° 5° 6°
Festival de Composiciones Gimnásticas Optativa 1° 2° 3° 4° 5° 6°
Gimnasia Escolar Optativa 3° 4° 5° 6°
Gimnasia Rítmica Mexicana y Taller
Coreográfico Optativas 3° 4° 5° 6°
Juegos deportivos escolares infantiles y
juveniles del Distrito Federal Optativa 4° 5° 6°
Juegos escolares de deporte adaptado Optativa 4° 5° 6°
Olimpiada del conocimiento infantil,
Convivencia Cultural Optativa 1° 2° 3° 4° 5° 6°
Proyecto de Evaluación Educativa en
Educación Física Optativa 1° 2° 3° 4° 5° 6°
Semana de Educación Física y Deporte
Escolar Optativa 1° 2° 3° 4° 5° 6°
Simultáneas de Ajedrez Optativa 4° 5° 6° Fuente: Catálogo de proyectos y servicios 2002-2003. Educación primaria.
México, SEP. 2002-2003.
Al igual que en los espacios cerrados, estáticos y sofocantes de las
aulas, la educación física ha sabido organizar y racionalizar sus
prácticas en redes de relaciones y comunicaciones rígidas, pero
también puede permitir el movimiento espontáneo y el desplazamiento
de los cuerpos a través del juego y la recreación a condición de
desarrollarse en aras de una libertad vigilada. Los maestros de
12
educación física,9 especialistas en la tarea de inscribir una
racionalidad técnica a las fuerzas del cuerpo, de sus posibilidades
de movimiento, de su capacidad de resistencia y de su fortaleza ante
un trabajo en la escuela, adecuan la intensidad y la duración de los
ejercicios a las necesidades escolares: las contingencias, el área
de trabajo, los objetivos educativos, el grado, la edad y el tipo de
crecimiento de los alumnos.
La observación pedagógica está centrada en atender los
indicadores evolutivos de ritmo respiratorio, el color de la piel,
el tipo de sudor, los sistemas energéticos y la facilidad o
dificultad para realizar un ejercicio. Una atención detallada al
cuerpo escolar. Estamos ante una tecnología corporal para corregir
malos hábitos de postura; para favorecer el óptimo desarrollo de
órganos, aparatos y sistemas.
Las actividades físicas en la escuela, si son bien orientadas,
contribuyen al mejor crecimiento y desarrollo del niño, estimulan la
coordinación muscular y nerviosa, la buena postura. El cuerpo es
objeto y blanco de una serie de métodos, de doctrinas, de teorías y
de sistemas de entrenamiento, del reconocimiento de las funciones
orgánicas y de la representación gráfica del movimiento.10 Los
encargados de dicha tarea son los mecánicos del movimiento, los
entrenadores, los higienistas y los anatomistas del ámbito escolar;
aunque también son llamados los operarios y obreros del movimiento.
9 A la educación física también se le ha llamado: ―Dispensario a cielo abierto de
medicina preventiva‖ o ―Atractivo camuflaje de una preparación militar o de un
encuadramiento ideológico‖. Jean-Jacques Barreau y Jean-Jacques Morne.
Epistemología y antropología del deporte. Madrid, Editorial Alianza, 1982, p. 81. 10 René Suaudeau. Los nuevos métodos de educación física. Buenos Aires, Paidós,
1972, pp. 45-49.
13
A pesar de su confusión, el proyecto general la educación física
en la escuela contiene una verdadera racionalidad técnico-
científica, expresado en la producción de fórmulas didácticas:
descripciones analíticas de ejercicios, enumeración de metas,
indicaciones sobre las condiciones de ejecución.
Los técnicos deportivos se ufanan de las explicaciones
fraccionadas de los movimientos humanos, se regodean en las
descripciones de las trayectorias, en las graduaciones y series de
ejercicios. Su objetivo: especializar en todos los detalles el
movimiento de cada parte del cuerpo: ―La prudencia, la
circunspección y el cálculo tan preponderantes en la vida cotidiana
y tan contrarios al espíritu del juego, dominan al deporte como a
todo lo demás‖.11 Correr, saltar, trepar, nadar, lanzar, caer,
rodar, reír, bromear, manifestar alegría, son actividades que han
dejado de ser naturales, placenteras, espontáneas, dionisíacas; hoy
son sinónimos de competición, enfrentamiento, rendimiento, eficacia:
fenómenos bañados bajo la luz apolínea.
El deporte y su espacio están imbuidos por una ideología que
refleja los principios sobre los cuales se funda nuestra sociedad.
Espacios normalizados: competencia, rendimiento, jerarquía,
especialización, disciplina: ―A la naturaleza le es totalmente
indistinto que un individuo llegue una centésima de segundo antes
que otro a una línea imaginaria, la meta, o un segundo o dos‖.12
La figura del atleta, y en particular la del corredor, se
instala como una de las imágenes más caras de nuestro mundo, que
11 Jean-Jacques Barreau y Jean-Jacques Morne. Epistemología..., op. cit. p. 87. 12 Mauricio Ortiz. ―El corredor olímpico”. México, Letras Libres, septiembre,
2000, año II, N° 21, pp. 16-18.
14
valora por encima de todo la rapidez de las vidas, de la información
y de las cosas, una sociedad que vende el sueño de un hombre
enteramente joven, atlético y esbelto, absolutamente especializado,
eficiente, ganador, competitivo; hombres, mujeres y niños de alto
rendimiento.
En los patios escolares, muchos niños quedan excluidos de los
equipos de fútbol o de básquetbol, ya por su indiferencia a las
formas de la burocracia y el absurdo de una actividad llena de
reglas, advertencias, amonestaciones; lo contrario a la libertad
lúdica del niño cuando juega. ―Se comprende que cuando, para la
ridícula clase de deportes todo el mundo debía distribuirse
obligatoriamente por equipos, los grandes capitanes echasen volados
a fin de que los perdedores cargaran con los dos o tres anormales
que con nuestra presencia infectábamos el grupo.‖13
El propósito del deporte educativo es la adecuación de los
regímenes corporales a las doctrinas escolares: respeto a las
edades, conocimiento de las constituciones, separación por sexos,
adecuación de los esfuerzos tomando en cuenta los equilibrios
morfológicos, los ritmos respiratorios y fisiológicos.
La presencia discursiva del deporte escolar lo constituye la
temática de las fases sensibles, las capacidades físicas
condicionales (fuerza, flexibilidad, resistencia y velocidad), las
coordinativas (maduración neuromuscular, sistema nervioso), los
13 ―Las benditas reglas. Si son tan necesarias y dignas de análisis. Me pregunto
por qué no las multiplicarán. Quizá fuera apasionante, por ejemplo, que el concepto
de gol fuese variando con la hora del día y las fases de la luna. Aunque prefiero
el cuento de aquel a quien, al explicarle las reglas del juego, le dijeron en voz
baja que, si no lograba golpear la pelota, golpease al jugador más cercano. ¡Vamos
a jugar de una vez, sin pelota! –grito entusiasmado.” Gerardo Deniz. ―Preludio a
Sydney‖. México, Letras Libres, septiembre 2000, N° 21, pp. 32-34.
15
tipos de crecimiento, los sistemas energéticos y las armonías del
desarrollo corporal.14
A los maestros de educación física les debemos los primeros
intentos de medición de los esfuerzos corporales: balances
comparativos, registros, cálculos y estimaciones gráficas de los
progresos alcanzados (mediante cifras, columnas y estadísticas
personales).15 ¿Qué particularidades, en el terreno del conocimiento
y su práctica, hicieron necesaria una disciplina que aumenta los
rendimientos humanos, racionaliza las fuerzas anatómicas y sobre la
base de esos conocimientos transforma, incluso, los cuerpos
escolares?
Dichos instrumentos tienen como herencia, en el proceso de
civilización e institucionalización del deporte y de la educación
física, a los criadores ingleses de ganado, los que intentaban
resolver una ecuación económica: contabilizar por separado las
necesidades del animal de trabajo que gasta energías, del ganado de
engorda que las ahorra y de la vaca de ordeña que las agota. Criar
ganado equivale a llevar al punto óptimo el calculo de estas
relaciones, mejorar la producción por medio de especializaciones
contabilizadas ¿el entrenamiento de los atletas profesionales no se
rige acaso por principios teóricos idénticos? Recordemos que la
palabra inglesa training designa dos artes por igual, el de criar
14Programa de Educación Física, Preescolar, Primaria, Secundaria. México, SEP-DGEF
1994, pp. 3-34. 15 ―Las frecuentes tentativas de medición que enfrentaron los maestros de gimnasia
del siglo pasado revelan qué difícil es apreciar el valor intrínseco y las ventajas
reales producidas por un sistema de ejercicios específicos o valorar los beneficios
netos que proporciona.‖ André Rauch. El cuerpo en la educación física. Argentina,
Kapeluz, 1985, p. 9.
16
ganado y el de formar a los deportistas profesionales. Inglaterra se
ufana de haber sido la cuna de ambos.16
En la educación física de orientación deportiva se descompone el
ejercicio que se desea aprender: enseñar por separado cada una de
sus secuencias, repetir hasta lograr el objetivo; orientación,
visualización y fijación de las formas mediante la manipulación de
objetos de diferentes pesos y tamaños; tomar distancia con respecto
a los objetos, con el fin de aprehender su sentido; domino de la
relación espacio-tiempo a través de botar, lanzar y atrapar pelotas
de distintos tamaños; sincronización que implica movimientos de
coordinación y respiración; trabajos de lateralidad, orientación,
estructuración del espacio-tiempo, habilidad manual y equilibrio
(educación psicomotriz); movimientos de orden: "firmes ya"; "flanco
izquierdo-derecho"; "media vuelta por tiempos: uno, dos, tres";
"paso corto, paso redoblado"; "descanso" (educación militar);17
agudizar algunas percepciones; desarrollar determinadas formas de
atención, y desencadenar ciertos procesos mentales, ya que es en la
primaria cuando las estructuras nerviosas se encuentran en su
maduración (6 a 12-14 años).
El deporte es un proyecto de racionalización de las capacidades
físicas, de trabajar el cuerpo en sus partes:18 volverlo más fuerte,
más resistente, más veloz y más flexible. Identificar grandes masas
16 Idem. pp. 15-16. 17 Ibídem. p.8. 18 El gran libro del hombre-máquina ha sido escrito simultáneamente sobre dos
registros: el anatomo-metafísico, compuesto en sus primeras páginas por Descartes,
y que los médicos y los filósofos continuaron; y el técnico-político, que estuvo
constituido por todo un conjunto de reglamentos militares, escolares,
hospitalarios, y por procedimientos empíricos y reflexivos para controlar y
corregir las operaciones del cuerpo. Michel Foucault. Vigilar y castigar. México,
Siglo XXI, 1999, p. 140.
17
musculares y atender la movilidad de los grupos particulares. Su
trabajo son acciones concretas para resolver problemas específicos
de enseñanza-aprendizaje, ya que ofrece indicaciones detalladas: se
seleccionan pasos y movimientos. La forma de cada gesto manual se
aprende lentamente lo cual, como dice Marcel Mauss: "permite
distinguir la marcha de un inglés de la de un francés". Los maestros
de educación física aprenden una teoría anatómica y fisiológica del
movimiento corporal. El adiestramiento de una técnica corporal busca
el rendimiento y la eficacia de movimientos bien coordinados hacia
un fin. Su sentido es el de la habilidad; como aquellos que saben
hacer algo.
En fin, el deporte, más que un juego, es toda una serie de
prácticas que permiten racionalizar las capacidades físicas del
cuerpo y elaboran procedimientos didácticos para analizar, dividir,
describir, graduar, repetir y especializar los movimientos de cada
parte del cuerpo; respetar edades, conocer constituciones,
diferenciar sexos; adecuar y medir esfuerzos físicos; equilibrar
trabajo y ocio; botar, lanzar, atrapar, correr, saltar, rodar y
driblar con técnica, con una economía corporal, sin movimientos de
más.
Éstas acciones tienen como objetivo político inscribir una
racionalidad técnica de las fuerzas del cuerpo en la educación
básica para producir el efecto de sumisión:
La sumisión incondicional que el entrenador de tipo domador espera
de su pupilo produce los efectos que uno de los remeros de nuestro
equipo nacional en los Juegos Olímpicos de Londres me describía: por
un lado hay mal humor y odio. Detesto a este tipo que me hace
repetir diez veces, cien veces el mismo movimiento... Sin embargo,
18
al mismo tiempo me siento extraordinariamente tranquilizado y
seguro: hay alguien que piensa por mí... Poco a poco sobreviene una
especie de pasión: la pasión de la docilidad.19
Es un objetivo político: integrar una necesidad vital en hábitos
cotidianos de salud. Formar ciudadanos fuertes, sanos y al mismo
tiempo obedientes a los mandatos del bien del Estado: ―Los deportes
colectivos desarrollan el sentido social y tienen el raro mérito de
obligar al niño a doblegarse, someterse, obedecer‖.20
El deporte es una disposición simbólica de la violencia que
busca recrear un mundo donde no se realizan peleas más que
voluntariamente aceptadas, resumen del proceso civilizado del
dominio de su agresividad natural y el control constante de sus
reacciones.
Entendemos al deporte tanto en su sentido económico como en su
sentido filosófico; sus propiedades alienantes y represivas como sus
virtudes socializantes y liberadoras. ¿Cómo cuantificar el valor
intrínseco y las ventajas reales producidas por un sistema de
ejercicios específicos? ¿Cómo consumir las fuerzas del cuerpo para
hacer de él un cuerpo racional y productivo? ¿Por qué medios es
posible asegurar la reproducción de la fuerza de trabajo? ¿Cómo
logran los pedagogos aumentar los rendimientos humanos, modificar
los procedimientos didácticos, alterar las técnicas corporales y aún
transformar los cuerpos? ¿Qué esquemas corporales —movimientos,
juegos, prácticas y reglamentos— atraviesan los cuerpos escolares?
19 Georges Magnate. Una herencia irreconciliable: P. De Coubertin en Jean-Jacques
Barreau y Jean-Jacques Morne. Epistemología... op. cit., p. 84. 20 ―La fuerza del cuerpo, como la del carácter no sólo se forma con la alegría sino
también con el sufrimiento y el dolor. El deporte es adecuado para ello. La
voluntad se debilita cuando se complace en amaneramiento, el placer, la facilidad,
la ociosidad.‖ Maurice Baquet. El síndrome de Pigmalión, en Jean-Jacques Barreau
y Jean-Jacques Morne. Epistemología. op. cit. p. 75.
19
¿Cómo usan los maestros las singularidades de la maquinaria escolar
a lo largo y ancho de la escuela: formaciones, marchas, tablas
masivas, desfiles, separación por grado, sexo, habilidad, fuerza e
inteligencia? Son las preguntas que hoy, todavía, siguen debatiendo
los educadores físicos.
El modelo cuestionado
¿Y entonces, para qué sirve la educación física? La utilidad siempre
es cosa de apreciaciones no arbitrarias sino dictadas por las
necesidades de cada época. En el modelo que anteriormente
describimos, podían encontrarse algunos de los objetivos a alcanzar
en dos diferentes momentos históricos. En un primer momento,
aparecieron los higienistas, con todas las técnicas de intervención
que buscaban regular la salud de los niños; más tarde señalamos la
introducción del deporte en la educación física; en otros momentos
deberíamos resaltar la importancia de los militares, atendiendo a las
marchas y la disciplina; luego los técnicos en habilidades
psicomotoras. La explicación de estas variaciones hay que buscarlas
menos en lo que se dice explícitamente que en lo que está contenido
en los discursos y las decisiones políticas sobre los asuntos
educativos.
Pese a la pluralidad de concepciones curriculares sobre lo que se
considera útil, la tradición normalista en los patios escolares ha
jugado un aspecto positivo en el resguardo del campo específico,
referido no sólo al aspecto laboral sino entendiendo éste como un
campo de las disciplinas: conjunto de saberes, conocimientos y
20
técnicas cuya adquisición es juzgada útil para la formación de la
persona, de su inserción social y el modo como pueda enfrentar
problemas inmediatos. ¿Cómo se utilizan estos saberes en las
escuelas? ¿Cómo trabaja el maestro de educación física? ¿Quién es? En
preescolar, el maestro de educación física tiene un horario diferente
al estructurado por la jornada de 9:00 a 12:00. El maestro trabaja
por horas, lo cual lo convierte en un profesional itinerante (llega a
tener hasta cuatro escuelas para completar sus horas laborales), con
un desarraigo que genera una falta de identificación con la
institución particular en la que se labora.
En primaria hay una desvinculación con el proceso formal de
evaluación; una fragmentación, por así decirlo, ya que no hay trabajo
colegiado con los compañeros de salón, no hay comunicación entre los
pares; se ve en la necesidad de generar sus propios materiales
didácticos; construye su identidad laboral como un personal de apoyo
–el viejo prejuicio de que el desarrollo corporal va en detrimento de
lo intelectual– lo que genera un disminuido nivel de aceptación
social. Además, tiene que atender una multiplicidad de exigencias, lo
que genera constantes ausencias fuera de la escuela que distrae de la
atención a los grupos y se impide establecer poco vínculo con los
estudiantes y los padres de familia.
En secundaria hay un exceso de la carga de trabajo, solo dos
profesores atienden a toda la población escolar del plantel. No
mantienen casi ninguna relación con los otros profesores. Sin embargo
está muy cercano a las dinámicas comunitarias de los alumnos, debido
21
a que posee herramientas para el adecuado desarrollo de las dinámicas
de grupo, además es ―el que sabe hacer las cosas‖.
Como vemos el campo del educador físico, es un campo plural de
conocimientos, problemas, necesidades y acciones; está atravesado por
concepciones diferentes tanto de su desarrollo profesional como de su
formación.
El currículo de las escuelas de educación física se agrupaba en
cinco academias: ciencias sociales, técnico-deportivas, técnico-
artísticas, biológicas y psico-pedagógicas. Posiblemente esta
diversidad es lo que la ha delimitado, configurado y diferenciado de
otros campos a la educación física;21 además de generar juegos de
intereses particulares que le permiten confrontar posiciones con
otras áreas del saber. Todo esto implica que el desarrollo de su
campo profesional nunca sea lineal, llano, sin tropiezos de progreso
continuado, por el contrario es abrupto a veces violento, de crisis,
de contradicciones y rupturas; todo esto se expresa en el cambio
curricular que están experimentando las 58 normales de educación
física en todo el país. Cambio que afectará muy probablemente las
concepciones de lo que se considera útil, así como de las acciones,
contextos institucionales, espaciales y temporales de la educación
física en la educación básica.
El cambio curricular, operado por la Dirección General de
Normatividad (DGN) y bajo la responsabilidad de la Subsecretaria de
21 ―La estructura del campo es un estado de la relación de fuerzas entre los
agentes o las instituciones que intervienen en la lucha, de la distribución del
capital específico que ha sido acumulado durante luchas anteriores y que orienta
las estrategias ulteriores.‖ Pierre Bordieu. Sociología y cultura. Algunas
propiedades de los campos. México, Grijalbo-Consejo Nacional para la Cultura y las
Artes, Colección Los noventa, 1990, p.136.
22
Educación Básica y Normal (SEBN), partió de una critica: la tarea
del profesional de la educación física no es la de ―hacer
ejercicios‖, sino la de enseñarlos; el maestro de educación física es
visto como un técnico que aplica formulas y conceptos desarrollados
en otras áreas y sólo tiene que evaluar su aplicación y medir sus
resultados; es tratado como reproductor de un saber producido en
otros ámbitos. Implementa metodologías a partir de un modelo: el
ganador, el eficiente, el estético y estandariza esquemas de
movimientos en los que la prioridad radica en que todos hagan lo
mismo a la hora que se les dice y en el espacio que se les designa,
con la finalidad de hacer homogéneo el comportamiento motor. Esto se
tradujo en una ausencia de estructura y una nula tradición de
investigación. No hay equipos institucionales de investigadores, no
hay continuidad de estudios para los egresados, que son sólo eso
–egresados y no graduados–, no hay reconocimiento de los títulos
docentes en el mundo académico.
La adopción de un enfoque particular de la ciencia y la
aplicación de las ciencias biomédicas o kinesiológicas al estudio del
movimiento humano se traducen en una visión tradicionalista y
tecnológica del currículo tal sesgo ha producido un abuso en la
extensión de estos métodos para la investigación de otros tópicos.
Así, resulta bastante normal que los profesores de educación física
se quejen de que las ciencias sociales son simplistas, subjetivas y
están sujetas a la mera opinión, porque no demuestran la precisión y
exactitud que aclaran las ciencias médicas. Esto ha producido un gran
daño a las prácticas de la educación física en las escuelas, porque
23
ha creado una serie de expectativas que nunca se conseguirán y que
nunca deberíamos dejar que se cumplieran. La idea es subrayar que lo
que aprenden los alumnos de las escuelas normales no está vinculado
con la práctica cotidiana de los patios escolares en la educación
básica.
La reforma de la educación física
En el marco del Programa de Transformación y Fortalecimiento de las
Escuelas Normales, iniciado en 1996, se encuentran cuatro acciones
que tienen como finalidad la ―Reforma Integral de la Educación
Normal‖. La primera se refiere a ―una transformación de los
contenidos curriculares‖. Parte del diseño, la elaboración, edición y
distribución de nuevos planes de estudio para la formación inicial de
maestros, apegándose a los rasgos particulares de cada una de las
modalidades educativas en las que tienen espacios de intervención los
egresados de estas escuelas; cabe señalar que la definición de
criterios, la orientación de las actividades de enseñanza y
aprendizaje obedecen a la naturaleza y las finalidades específicas de
cada una de las tradiciones normalistas: secundaria, primaria,
preescolar, educación física y próximamente educación especial.
La segunda acción corresponde a la actualización profesional. Su
finalidad es que los profesores conozcan los fundamentos, los
contenidos y las orientaciones de las asignaturas que imparten. Los
objetivos son dos: comprender mejor la tarea que les compete;
mejorar y abrir espacios de reflexión sobre su práctica docente.
24
La tercera está centrada en la elaboración de normas y
orientaciones para la gestión institucional y la regulación del
trabajo académico. Consiste en promover la participación y evaluación
de los docentes en los planes de desarrollo institucional, bajo el
enfoque del trabajo colegiado.
La cuarta acción es el mejoramiento de la planta física, que
implica destinar recursos para atender necesidades de reparación y
mantenimiento de los planteles; dotar a las escuelas de acervo
bibliográfico actual y especializado; mobiliario de aulas; conexión a
la Red Satelital de Televisión Educativa (Edusat), etcétera.
A casi seis años de aplicación del programa, se han diseñado
nuevos planes de estudio para las licenciaturas de preescolar,
primaria y secundaria. A partir del ciclo escolar 2002-2003 entró en
vigencia el nuevo plan de estudios para la licenciatura en educación
física, en todas las escuelas públicas y privadas de la República
Mexicana.
La reorientación de la educación física en la educación básica
parte de seis líneas:
1. La corporeidad como base de la educación física. Busca la
identidad corporal del alumno, conferir un estilo propio de
motricidad a cada individuo, un conocimiento de sí mismo. La
construcción de la competencia motriz, entendida como la capacidad
de los alumnos de educación básica para dar sentido a su propia
acción, orientarla, regularla y comprender las posibilidades de lo
que se puede hacer con el cuerpo. Se trata de presentar retos o
problemas motores a resolver antes que modelos a ejecutar.
25
2. La edificación de la competencia motriz. Orientar aspectos
perceptivos y cognitivos de la producción de sus movimientos;
regular y controlar las respuestas motrices a través de una
práctica variable y abundante.
3. El juego motriz como medio didáctico de la educación física.
Implica concebir una práctica natural en el ser humano mediante la
cual se pueden inducir diversas vivencias en el plano afectivo,
cognitivo, social y motor que pueden traducirse en aprendizajes.
4. La diferenciación entre educación física y deporte. Dimensionar
el uso del deporte como un medio de la educación física y no como
un fin o como un método que justifique su presencia a partir de la
práctica cotidiana de diferentes disciplinas deportivas. Pretende
aprovechar el deporte según diferentes perspectivas: educativas,
orientación y promoción, social y organizativa y de iniciación
deportiva
5. La orientación dinámica de la iniciación deportiva. Con un
enfoque que permita atender y canalizar las diferentes motivaciones
que los alumnos tienen respecto a la práctica de actividades
físico deportivas; con ese fin manifiestan como prioridades el
desarrollo de las habilidades motrices la canalización del agon, la
vigorización física y el aprovechamiento o la recuperación del
placer que se experimenta al jugar.
6. Promoción y cuidado de la salud. Orientar hacia una vivencia
positiva que permita realizar ejercicios de manera correcta,
actividades adecuadas a su capacidad, la delimitación de los
espacios y la propuesta de actividades conforme al nivel de
26
desarrollo, sexo e intereses de los propios alumnos; cabe destacar
algunos rubros específicos como prevención de enfermedades,
accidentes y adicciones así como proponer formas de alimentación
equilibrada y descanso adecuado.
Son estas las líneas básicas de la reforma, sin embargo, como dice
Edgar Morín, para repensar la reforma hay que reformar el pensamiento
y viceversa. Esto es, si no se reorientan las condiciones de trabajo
de los maestros de la especialidad, difícilmente se logrará, cuando
menos a mediano plazo, que el uso y el disfrute del cuerpo sean
considerados como un derecho social. Difícil reformar las partes sin
reformar el todo.
La educación física tiene un programa complejo, le espera un
trayecto difícil para transformarse en un espacio social que atenúe
ciertas desigualdades o para evitar que se sigan profundizando, para
tematizar la educación desde la problemática de lo corporal,
colaborar al desaulamiento (parcial) de la escuela; para que las
comunidades no se desescolaricen, para introducir lo vivencial en la
escuela, para que funcione como centro de aprendizaje y de
convivencia, para ayudar a no padecer los encierros escolares.