SALUD MENTAL IMPORTANCIA

Desde que el mundo es mundo se ha tratado de buscar “la causas” de las enfermedades humanas y la forma de “curarlas”, por eso desde los primeros años la enfermedad se veía como un castigo, posteriormente en la Edad Media era considera como una posesión demoníaca, no fue sino hasta 1903 cuando Clifford Beers escribió en su libro “Una mente que se encontró en sí misma”, en donde relató sus experiencias negativas como interno en un manicomnio y luchando por cambiar esa situación.

A raíz de este movimiento se comenzó con una cultura de Salud Mental, iniciando en Estados Unidos y otros países desarrollados, posteriormente en México se construyeron el “Pabellón de Psiquiatría Infantil del Manicomio de la Castañeda” y el “Hospital Infantil de la Ciudad de México”, Instituciones que aportaron un cambio en el tratamiento de la salud mental infantil.

Si bien es cierto que estas instituciones estuvieron encaminadas a la mejora de la salud mental tendríamos que preguntarnos ¿qué es salud mental?, ya que existe una gran discrepancia por el léxico de quienes trabajan en esta área, la comúnmente aceptada es que “la salud mental, es un sentimiento de bienestar emocional producto de la relación equilibrada y armónica entre su realidad interna y externa”, para lograr este equilibrio es necesario la intervención individual y colectiva, donde los especialistas de la salud mental emprenden una acción integral en tres niveles, de prevención, terapéutica y de rehabilitación, donde a nivel de prevención el objetivo es favorecer actividades que favorezcan un mejor grado de salud mental. A pesar de las acciones anteriores el grupo poblacional podría padecer trastornos mentales, los cuales requerirán de una acción terapéutica, la cual consistirá en disminuir la prevalecía, es decir la duración de los casos probados de enfermedad, la cual utiliza estrategias de diagnóstico y tratamiento, si la prevención y la acción terapéutica no evitan la cronicidad y secuelas será necesaria una rehabilitación, la cual apuntará a reducir en la comunidad la proporción de funcionamiento defectuoso por secuelas, tratando de recuperar la capacidad productiva y la posibilidad de reintegración.

Estos niveles de intervención son importantes, aunque tratándose de niños tendríamos que hacer énfasis a nivel preventivo, para poder conservar la salud mental del escolar, por lo que es necesario tomar en cuenta los escenarios que rodean al niño, la familia será una aproximación a las relaciones interpersonales futuras del niño en todos los ámbitos sociales, la escuela será la segunda esfera donde se desenvuelva y se pueden detectar problemas orgánicos y emocionales, los cuales puedan ser canalizados con diversos especialistas, con la finalidad de promover un mejor desarrollo de la personalidad del escolar.

En ocasiones existen sucesos precipitantes que pueden provocar “crisis” tanto en niños como en adultos, la cual puede reflejar una desorganización temporal y una pérdida de la capacidad de resolución de problemas. En tal caso lo recomendable sería iniciar un proceso psicoterapéutico; en el caso de un niño en crisis, los padres se convertirán en una parte importante dentro de dicho proceso, ya que son estos pilares fundamentales en la educación y desarrollo de sus hijos.

El primer paso consistirá en recabar una historia clínica, haciendo hincapié en sus fortalezas y dificultades, para posteriormente hacer una evaluación y clasificación de cada área problemática, para así mismo seleccionar uno o dos problemas a tratar programando las sesiones, en los cuales el terapeuta mediante diversos métodos ayudará al niño a expresar sus sentimientos a través de la fantasía, además movilizará una red de apoyo entorno al niño, para realizar un seguimiento con los padres acerca de su progreso, poco a poco el niño será capaz de identificar su conflicto así como el repertorio de mecanismo de defensa alternativos para manejar su problemática, finalmente se examinará junto con los padres y el niño su progreso para que sean capaces de trabajar por sí mismos.

Con todo lo anterior podemos concluir que la salud mental es importante para el bienestar psíquico del ser humano, ya que sin esta, se pueden presentar trastornos que provoquen un desequilibrio importante en su desarrollo que no le permita una adaptación adecuada con su medio ambiente, por lo que es importante llevar a cabo un buen tratamiento a los diferentes niveles de intervención, específicamente la prevención en niños, ya que sin este se podría desarrollar un trastorno mental agudo, por lo que se vuelve importante recomendar a los padres de familia, mantener una adecuada comunicación en la escuela para llevar a cabo un programa de salud mental, siempre involucrando a padres, maestros, pedagogos que pueda permitir un clima más amable y constructivo en beneficio del niño, lo cual se verá reflejado en un mejor rendimiento, iniciativa, adaptación y actitudes positivas.

Recuerda que es importante estar comunicados con la escuela y en los círculos en los que tú hijo interactúa diariamente, conversa, juega, establece reglas y límites, reconoce sus equivocaciones, pero no te olvides nunca de reconocer también sus logros personales y académicos. De esta forma podrás ayudar a tú hijo a tener un mejor desarrollo y cuando sientas que la situación sale fuera de tú control, acércate al especialista, ellos te pueden orientar y recuerda que será una labor en equipo, en el cual tú serás parte importante del tratamiento para poder ayudar a tú hijo.