revista migraciones forzadas 1

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MIGRACIONES FORZOSAS Desplazamiento interno 1998 Enero-Abril incorpora la RPN revista publicada por el Refugee Studies Programme en asociación con el Global IDP Survey edición en castellano publicada por HEGOA, Instituto de Estudios sobre el Desarrollo y la Economía Internacional, Universidad del País Vasco Sección especial sobre desplazados internos: China, sur de África, Colombia Nueva legislación sobre asilo en Irlanda, Uganda y Francia Bosnia-Herzegovina: cuestiones prácticas en el retorno de refugiados y desplazados internos Región de los Grandes Lagos: propuestas para mejorar la respuesta en las emergencias complejas ADEMÁS, las secciones habituales: publicaciones, informes sobre conferencias, investigación y novedades de HEGOA, el RSP y de la GIDPS 1 ver páginas 4-16 ver páginas 17, 20 y 27 ver páginas 21-26 ver páginas 30-33 ver páginas 34-41

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Desplazamiento Interno

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MIGRACIONESFORZOSAS

Desplazamiento interno

1998 Enero-Abril

incorpora la RPN revistapublicada por el Refugee Studies Programme en asociación con el Global IDP Surveyedición en castellano publicada por HEGOA, Instituto de Estudios sobre el Desarrollo y laEconomía Internacional, Universidad del País Vasco

Sección especial sobredesplazados internos:China, sur de África,Colombia

Nueva legislación sobreasilo en Irlanda, Uganda yFrancia

Bosnia-Herzegovina: cuestiones prácticas en elretorno de refugiados ydesplazados internos

Región de los GrandesLagos: propuestas paramejorar la respuesta en lasemergencias complejas

ADEMÁS, las seccioneshabituales: publicaciones,informes sobre conferencias,investigación y novedadesde HEGOA, el RSP y de laGIDPS

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ver páginas 4-16

ver páginas 17, 20 y 27

ver páginas 21-26

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de las directoras

MIGRACIONES FORZOSAS revista2 enero - abril 1998, 1

La Revista sobre Migraciones Forzosasproporciona un foro para el intercambio deexperiencia práctica, información e ideas

entre investigadores, refugiados y desplaza-dos internos, y los que trabajan con ellos. Lapublica tres veces al año en inglés, castella-

no y árabe el Refugee StudiesProgramme/Universidad de Oxford en aso-ciación con Global IDP Survey del Consejo

Noruego para Refugiados. La edición en cas-tellano es realizada por Hegoa, Universidad

del País Vasco.

EDICIÓN EN INGLÉS

DirectorasMarion Couldrey y Sharon FordEncargada de suscripciones

Sharon Westlake

Revista sobre Migraciones ForzosasRSP, Queen Elizabeth House,

21 St Giles, Oxford OX1 3LA, R.U.Tel: + 44 (0)1865 280700/270722

Fax: 44 (0)1865 270721Correo electrónico: [email protected]

Chemin Moïse-Duboule 59CH-1209 Ginebra

SuizaTel: + 41 22 788 8085Fax: + 41 22 788 8086

Correo electrónico: [email protected]

El material y la información contenidos en laRevista sobre Migraciones Forzosas refle-

jan las opiniones de los autores, pero noreflejan necesariamente las del RSP, Global

IDP Survey o Hegoa. El material de laRevista sobre Migraciones Forzosas

puede ser reproducido libremente, pero porfavor, cite la fuente. Las fotografías deberían

reproducirse sólo en el contexto de los artículos en los que aparecen.

Próximos números :Mayo/Agosto 1998: campos/asentamien-

tos temporalesSeptiembre/Diciembre 1998: cuestiones

urbanas

Les animamos a que envien material eninglés, castellano o árabe relacionado con eltema de cada número o con cualquier aspec-to de la migración forzosa. Por favor, pón-ganse en contacto con las Directoras parasolicitar una Guía para Colaboradores. Se

puede acceder a los artículos (en inglés) dela RMF en las páginas de internet del RSP enhttp://www.qeh.ox.ac.uk/rsp/ y del Global

IDP Survey en http://www.sol.no/nrc-no/idp.htm

EDICIÓN EN CASTELLANOHEGOA, Facultad de Ciencias

Económicas, Lehendakari Agirre83, 48015 Bilbao, España.

Tel: +34 4 944473512Fax: +34 4 944762653

Correo electrónico:[email protected]

Coordinador: Carlos Puig LizarragaD.L.: BI/859-95

Diseño de la cubierta: Zoran Avtarovski

Fotografía de la cubierta:

Independent Newspapers, Kwazulu-NatalImpresa por Idazkide S.A.L. sobre papel ecológico

100% libre de cloro

Damos la bienvenida al primer número de la Revista sobre Migraciones Forzosas incorpo-ra la RPN -el boletín de la Refugee Participation Network- y se publica en asociación con el Global IDPSurvey (Estudio Global sobre desplazados internos) del Consejo Noruego para los Refugiados y con elInstituto Universitario HEGOA.

Nos complace trabajar en esta nueva revista en colaboración con el Global IDP Survey. Aspiramos a comple-mentarnos mutuamente en nuestros respectivos trabajos, a ampliar el número de nuestros lectores y nuestracobertura y, sobre todo, a integrar las cuestiones relativas tanto a los refugiados como a los desplazadosinternos, trabajando juntos para asegurar que estas cuestiones sean prioritarias en el orden del día interna-cional. Este primer número se centra especialmente en los desplazados internos; hay más información sobreel Global IDP Survey en la página 41. La Revista sobre Migraciones Forzosas está apoyada por un ConsejoEditorial Asesor, la lista de cuyos miembros puede consultarse en la página 6.

¡Este número también introduce una nueva era en las suscripciones! Todos nuestros suscriptores debenrellenar y enviar el formulario de solicitud adjunto. Otros nuevos suscriptores pueden enviarnos una solici-tud.

Aunque las palabras “participación” y “red” no forman ya expresamente parte del título, todavía es partefundamental de nuestro trabajo alentar la participación de todos los sectores de nuestros lectores, y ofrecerservicios de intercomunicación a nuestros suscriptores. Nos complacería recibir artículos (3.000 palabrascomo máximo), informes, cartas, resultados de investigaciones y novedades sobre cualquier cuestión relacio-nada con la migración forzosa. Por favor, pónganse en contacto con las Directoras para obtener una Guía paraColaboradores. Cada número de la Revista sobre Migraciones Forzosas incluirá una sección sobre un temaconcreto: el de mayo/agosto de 1998 se centrará en los campos/asentamientos temporales, y el de sep-tiembre/diciembre recogerá una sección especial sobre cuestiones urbanas (fecha límite para la entrega decontribuciones: 1 de julio).

La Revista sobre Migraciones Forzosas es un foro para el debate y el intercambio de experiencias. Por favor,utilícenlo, y ayuden a mejorar las políticas y la práctica en beneficio de los refugiados y los desplazadosinternos de todo el mundo.

Con nuestros mejores deseos,

Marion Couldrey, Sharon FordDirectoras

de las directoras

eeddiicciióónn eenn ccaasstteellllaannooQueremos recordar a los lectores latinoamericanos y españoles que la Revista sobre MigracionesForzosas es la continuación del trabajo realizado desde 1994 con la revista RPN-Red de Comunicaciónsobre Refugiados, que tres veces al año ha llegado a vuestras manos. La edición en castellano sedistribuye a cerca de 600 organizaciones latinoamericanas y españolas, así como a personasindividuales que se suscriben por su interés temático. Éste primer número que presentamos lo estamosenviando a las mismas organizaciones y personas que recibían la RPN. Se amplía el campo temático conla problemática de los Desplazados Internos -DI- y se incorpora al consorcio el Global IDP Survey, lo queenriquece el contenido de la nueva revista. Los tres primeros números para 1998 están cofinanciados porla DG IA de la Comisión Europea.

Solicitamos a TODAS las organizaciones, instituciones públicas y privadas y personas receptoras -espe-cialmente de Latinoamérica- que completen el formulario de solicitud adjunto y lo envíen a HEGOA (Ref.Rev. Migraciones Forzosas) para poder actualizar la lista de envíos y así poder seguir recibiendo estarevista. No duden en contactar por carta o e-mail con Hegoa en caso de necesitar alguna aclaración.Pueden suscribirse otras organizaciones interesadas de su país.

Esperamos poder publicar aportaciones de las organizaciones, cartas, artículos y publicaciones referentesa la temática de la revista. Estamos abiertos a sugerencias, opiniones, comentarios y deseamos aportarla contribución de todas y todos en el trabajo en favor de los desplazados, refugiados y de las personasobligadas a emigrar por diferentes causas.

Recibid un cordial saludo,

Carlos Puig LizarragaCoordinador HEGOA

Global IDP Survey

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MIGRACIONES FORZOSAS revista 3enero - abril 1998, 1

Sección sobre desplazamiento internoLa migración forzosa dentro de las fronteras nacionales: el orden del día de los desplazados internospor Jon Bennett 4

Las Tres Gargantas: la herramienta no estudiada del desplazamiento por causa del desarrollopor Martin Stein 7

La respuesta nacional al desplazamiento internopor Jennifer McLean 10

Vivir en la sombra: los desplazados internos en el sur de Áfricapor Marion Ryan Sinclair 12

Colombia: la búsqueda de la paz en medio del conflictopor Seán Loughna 15

Los derechos humanos no tienen fronteraspor Maura Lean 17

Bosnia-Herzegovina: Problemas y progresos del proceso de retornopor Carl Hallergård 21

La gestión del retorno de los refugiados a Bosnia-Herzegovinapor Richard Jacquot 24

Visión desde las almenas: el trabajo comunitario en la frontera de la fortaleza europeapor Michael Collyer 27

La crisis de los refugiados en los Grandes Lagos: ¿Hemos aprendido alguna lección?por Flora MacDonald 30

Respuesta a las crisis en los Grandes Lagos africanospor Glynne Evans 32

Secciones habitualesPublicaciones 34Conferencias 36Cartas 37Investigación 38Cursos del RSP y HEGOA 40Novedades del Global IDP Survey 41

SumarioSumario

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MIGRACIONES FORZOSAS revista4 enero - abril 1998, 1

desplazamiento internosección

El desplazamiento interno no es unfenómeno nuevo, a pesar de que elreciente aumento de la actividad y

del análisis de la cuestión puedan hacerpensar lo contrario. Cuando a mediadosde este siglo se redactaron la Carta deNaciones Unidas y las Convencionessobre Refugiados, la proporción entredesplazados internos (DI) y refugiadosera similar a la actual. Lo que ha cambia-do es el número y la gravedad de lasguerras internas y un crecimiento corre-lativo de la presencia y la coberturaotorgada a la migración forzosa porparte de la comunidad humanitariainternacional. Hay todavía algunos paí-ses (como China y Birmania) en los quelas estimaciones sobre DI son demasia-do inexactas para garantizar conclusio-nes demográficas serias; sin embargo,una cifra global conservadora del des-plazamiento interno sería de unos 20millones de personas, un 30% más altaque la cifra estimada de refugiados másprecisa.

Los DI son aquellos que necesitan asis-tencia y protección como resultado deldesplazamiento forzoso en el interior desus propias fronteras nacionales. Más enconcreto, la definición actual de DI es:

“Persona o grupo de personas quese han visto obligadas a huir o adejar sus hogares o lugares de resi-dencia habitual como resultado de,o para evitar, en particular, losefectos de un conflicto armado, lassituaciones de violencia generaliza-da, las violaciones de los derechoshumanos o los desastres naturaleso causados por el hombre, y que nohan cruzado una frontera estatalinternacionalmente reconocidacomo tal.” [1]

La expresión “en particular” permite quecircunstancias distintas de las recogidassean tomadas en consideración; porejemplo, el desplazamiento como conse-cuencia del desarrollo en el que apareceun factor coercitivo. En general, la defi-nición no incluiría a los migrantes porcausas económicas, los refugiados retor-nados en virtud de programas delACNUR o los que reciben compensacióny protección estatal adecuadas tras losdesastres naturales o el reasentamientopor motivos de desarrollo.

La categoría de DI no resulta cómodapara las organizaciones de ayuda quetrabajan con ella, ya que no existe nin-guna institución que trate específica-mente el fenómeno del desplazamientointerno ni ningún cuerpo de normas quese apliquen a la situación de los DI. Paralas agencias especializadas de NacionesUnidas, los refugiados son responsabili-dad del ACNUR; los niños, de UNICEF; laalimentación, del PMA, y así sucesiva-mente. Los DI son “refugiados internos”cuya situación evidencia las lagunas delderecho y la asistencia internacionales.

Los abusos de los derechos humanosocurren principalmente en países en losque el conflicto interno es precursor deun Estado desintegrado y en el que noexiste el imperio del derecho. El accesoa las poblaciones (y, por lo tanto, lasestimaciones correctas de sus cifras) hasido difícil o imposible. Es más, a raízde Bosnia y Somalia, la intervenciónmilitar para proteger a los civiles, siem-pre selectiva, es cada vez menos proba-ble. Las agencias humanitarias se venforzadas a medir los beneficios con res-pecto a las pérdidas más que nunca. Porlo tanto, no es sorprendente que losdesplazados internos, a menudo incapa-

ces o no deseosos de pasar por los peli-gros de una existencia como refugiadosen un país vecino, son algunos de losindividuos más vulnerables en las crisiscontemporáneas.

El creciente número de desplazadosinternos resulta también del cambio enlas prioridades del régimen internacio-nal humanitario. La preocupación actualpor limitar los flujos de refugiados yevitar el asentamiento a largo plazo hatenido como resultado una política decambio hacia la “internalización” deldesplazamiento. Así, se hacen mayoresesfuerzos para mantener a las personasen sus propios países, incluso si seencuentran lejos de sus lugares de ori-gen. En el período posterior a la guerrafría, el cierre de las fronteras y la ges-tión de los conflictos están empezandoa reemplazar a la recepción y la protec-ción en otros países. El ACNUR se havisto forzado a recortar su propio man-dato de protección en ciertos momentosclave. Aunque no explícitamente, elprincipio del retorno voluntario ha sidoabandonado en favor de la repatriacióncontrolada, reforzada por el retorno a“zonas seguras”.

La migración forzosa dentro delas fronteras nacionales: el orden del día de losdesplazados internos (DI)

por Jon BennettEl creciente número de personasdesplazadas dentro de sus propias fronterassupone uno de los mayores retos para lacomunidad internacional.

Jon Bennett, Global IDP Survey

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MIGRACIONES FORZOSAS revista 5enero - abril 1998, 1

desplazamiento internosección

En el clima geopolítico actual, el ACNURtiene pocas alternativas. En Zaire, porejemplo, debió elegir entre dos opcionesigualmente desafortunadas: intentar res-catar y repatriar a los refugiados haciaalgunas zonas inseguras del oeste deRuanda, o abandonarlos a su suerte enlos bosques de Zaire. Esta crisis concre-ta puso de manifiesto más que nuncahasta ese momento las cambiantes reali-dades del terreno y la falta de deseo delos Estados miembros de NacionesUnidas de reforzar la capacidad delACNUR para hacer lo que debería hacermejor: proteger a los civiles desplaza-dos.

La cuestión no es si los refugiados reci-ben suficiente ayuda para el retorno, nisi están de hecho seguros. Lo que estáen juego es el elemento de elección per-sonal y de movimiento voluntario de losindividuos. Cada vez más, el orden deldía es decidido no por los refugiados,sino por acuerdos tripartitos entre elACNUR, los gobiernos de recepción y deacogida. Se buscan soluciones rápidasen un momento en el que la comunidadinternacional se encuentra cada vezmenos implicada en la búsqueda desoluciones políticas viables a las emer-gencias complejas. En la reunión de1997 del Comité Ejecutivo del ACNUR,los Estados fueron amonestados por sufracaso, hasta el momento, en propor-cionar pautas interpretativas sobre cues-tiones de protección, y su creciente ten-dencia a “inclinar la balanza hacia losintereses estatales hasta el punto de quela protección... se ve seriamente relega-da” [2]

Merece la pena recordar que el ACNUR,según su propio testimonio, se respon-sabiliza sólo de un número relativamen-te pequeño de los 20 millones de DI detodo el mundo. En 1996, el número dedesplazados internos “de la incumben-cia” del ACNUR era solamente de 4,85

millones de personas, de las cuales sólo1,53 millones recibieron asistencia. Estono implica negar que otras agencias deNaciones Unidas -especialmente UNICEF,el PMA, el PNUD y la OMS- estaban asis-tiendo colectivamente a un número depersonas mucho mayor. A pesar de ello,ninguna tiene lamaquinaria deprotección ni elmandato delACNUR. ElSecretarioGeneral deNaciones Unidas,Kofi Annan, ensu programa dereforma de juliode 1997, citó elreto de proporcionar protección, asis-tencia y reintegración, y apoyo al desa-rrollo de los DI como un ejemplo de unacuestión humanitaria que figura entrelas lagunas de los mandatos existentesde las distintas agencias. [3]

El término DI es implícitamente conser-vador, ya que reconoce las fronteras ysostiene la responsabilidad de losgobiernos de proteger a todas las perso-nas en su interior. En realidad, la causamás común del desplazamiento internoes precisamente la contraria: las perso-nas son desarraigadas forzosamente (amenudo por el gobierno encargado desu protección), se mueven en masa haciay entre las fronteras, se convierten enun “escudo” para las actividades insur-gentes, y son objeto de acoso y de viola-ciones de derechos humanos. Encontrarel equilibrio entre la protección interna-cional efectiva y la asistencia para losdesplazados, a la vez que se sostiene elprincipio de responsabilidad del Estado,se encuentra en la esencia misma de losdebates actuales relativos a los DI. Losesfuerzos para prevenir los flujos derefugiados han conducido a que se bus-quen las soluciones en la fuente de los

conflictos, incluso si ello implica no res-petar los derechos soberanos de un país.Esto trae a su vez mayores dificultades,ya que las mismas organizaciones deayuda se convierten en parte de la ecua-ción política y encuentran cada vez másdifícil argumentar su neutralidad.

Hasta cierto punto, la situación de los DIsirve para evidenciar la creciente redun-dancia de la maquinaria jurídica dispo-nible para su protección. LasConvenciones de Ginebra de 1949 y susProtocolos Adicionales de 1977 contie-nen disposiciones para la protección deciviles en conflictos internos, pero fue-ron formuladas cuando la guerra con-vencional era la norma y la tarea dedifundir las normas, más fácil. En 1992,el recién nombrado RepresentanteEspecial del Secretario General deNaciones Unidas para los DI, FrancisDeng, empezó la compilación de las nor-mas jurídicas aplicables a los DI.Encontró un número significativo delagunas en el derecho humanitario y enlos derechos humanos existentes y hasolicitado la formulación de un nuevoconjunto de Principios Rectores específi-camente para los DI. La elaboración denuevas normas internacionales seríacompleja y llevaría muchos años. LosPrincipios Rectores representan unaalternativa comprometida que, a pesarde no ser jurídicamente vinculante, pro-porcionará un marco normativo y unparámetro por medio del cual los gobier-nos y las organizaciones internacionales

Campo de desplazados internosen Afganistán

…la situación de los DI sirve para evi-denciar la creciente redundancia de lamaquinaria jurídica disponible para suprotección.

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desplazamiento internosección

de ayuda puedan dirigir los avances enla protección de los DI. La única solu-ción actual yace en una aplicación másrigurosa de las normas internacionalesexistentes y en un control más conse-cuente de los abusos.

La reciente reestructuración de NacionesUnidas dejará la coordinación de la asis-tencia y protección de los DI en lasmanos del Coordinador de Ayuda deEmergencia, uno de los miembros del“gabinete” interno de Kofi Annan. Elmodelo de una “agencia líder” en la quela distribución de los recursos, el con-trol y la información sobre los DI selleva a cabo a través de una agencia deNaciones Unidas en una emergencia, esla opción más práctica. Una críticacomún al sistema de Naciones Unidas,sin embargo, es que el suministro deayuda a menudo se convierte en un sus-tituto de la protección adecuada de losciviles. De hecho, puede causar un peli-gro no intencionado, como en Liberia en1996, cuando los civiles que recibíanayuda alimentaria murieron a manos deasaltantes armados. La reiterada afirma-ción “presencia es igual a protección” yano supera un examen riguroso. La pre-sencia internacional puede evitar toda-vía algunos de los peores abusos de losderechos humanos, pero normalmentesólo bajo una cierta cuota de violencia, eincluso en ese caso sólo donde las “nor-mas de la guerra” son mínimamentereconocidas.

Para 1997, había un consenso emergentesobre el tipo de objetivos realistas quepueden realizarse en los próximos años.Es improbable que se cree una nuevaagencia de Naciones Unidas y no habránuevas leyes como tales. Las agenciasespecializadas de Naciones Unidas,como la Comisión de Derechos Humanoso las ONG, intentarán la observancia delrespeto a los derechos civiles y políti-cos. En la práctica, lo mejor que sepuede esperar es la mejor coordinacióndel control de los derechos humanospor parte de las ONG, y de las agenciasgubernamentales e intergubernamenta-les sobre el terreno.

Lo crucial en la respuesta institucionalefectiva al fenómeno de los DI es larecogida y la difusión de cifras correctasy una metodología más global para tra-tar las lagunas de la asistencia y la pro-tección de las personas afectadas. Lainformación sobre los DI ha resultadocomplicada por el uso de definicionescontrovertidas, métodos deficientes derecogida de datos, y una falta de indica-ciones claras sobre quién es el responsa-ble de esta cuestión. Contar DI es real-

mente difícil, en parte porque losgobiernos, las NN.UU. y las ONG emple-an distintas definiciones en virtud de lascategorías de población específicas quecada una identifica, la capacidad organi-zativa y, en el caso de los gobiernos, el

nivel de injerenciapolítica que están dis-puestos a aceptar.Contar DI puedemolestar a los gobier-nos y no es un ejerci-cio fácil para las pro-pias Naciones Unidas.

Para superar este obs-táculo y cubrir una laguna en la informa-ción, en 1997 el Consejo Noruego paralos Refugiados lanzó el Global IDPSurvey (Estudio Global sobre DI) comofuente independiente de estadísticas,hechos y comentarios sobre el desplaza-miento interno. El programa incluye unabase de datos, perfiles de países y unaencuesta global integral futura (disponi-ble gratuitamente para los suscriptoresde la Revista sobre Migraciones Forzo-sas). También se implicará, a través deuna serie de conferencias regionales, enla difusión de pautas para una “buenapráctica” e iniciativas de formación. Laintención no es señalar a los DI comouna categoría distinta de personas quenecesitan atención; supone más bien

destacar el régimen de protección y asis-tencia existente aplicable a todos losciviles (especialmente a los desplazados)y solicitar que se preste mayor atencióna las necesidades particulares de aque-llos que han sido desarraigados forzosa-mente dentro de su propio país.

Jon Bennett es el Director del GlobalIDP Survey, un proyecto del ConsejoNoruego para los Refugiados. Lapágina de internet del Global IDPSurvey es: http://www.sol.no/nrc-no/idp.htm

Notas[1] Ésta es una definición práctica desarrollada alo largo del tiempo por el RepresentanteEspecial del Secretario General de NacionesUnidas para los DI y utilizada por el Global IPDSurvey. La definición del ACNUR es ligeramentemás restrictiva, centrándose sólo en aquellosque serían refugiados en virtud de laConvención de Ginebra sobre los Refugiados sihubieran cruzado una frontera.[2] Declaración ante el 48º Comité Ejecutivo porDennis McNamara, Director de la División deProtección Internacional, ACNUR, 16 de octubrede 1997.[3] Informe del Secretario General de NacionesUnidas a la Asamblea General, julio de 1997(Documento de NU A/51/950, párrafo 186).

Revista sobre Migraciones Forzosas

Consejo Editorial AsesorDeseamos dar la bienvenida a todos los miembros del Consejo Editorial Asesor

con los que tendremos el gusto de trabajar:Jon Bennett

Director, Global PDI Survey, Consejo Noruego para los RefugiadosCharles Clayton

Director Ejecutivo, World Vision-Reino UnidoKhadija Elmadmad

Catedrática, Facultad de Derecho, Universidad de CasablancaMaurice Herson

Coordinador de Comunicaciones y Activismo Humanitario,Departamento de Emergencias, Oxfam-Reino Unido/Irlanda

Rehana KirthisinghaResponsable Superior de Programas, Grupo para Oriente Medio, Europa y Asia

Central, Christian AidJill Rutter

Asesora Nacional para Educación, The Refugee Council (Londres)Lyndall Sachs

Responsable de Información Pública, ACNUR, Delegación para Gran Bretaña eIrlanda

Dan SeymourResponsable de Derechos Humanos, SCF/Reino Unido

David TurtonDirector, Refugee Studies Programme, Universidad de Oxford

Laurence WhiteheadMiembro del Departamento de Ciencias Políticas, Nuffield College, Universidad

de Oxford

La reiterada afirmación “presencia esigual a protección” ya no supera unexamen riguroso.

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MIGRACIONES FORZOSAS revista 7enero - abril 1998, 1

desplazamiento internosección

En China, la problemática del despla-zamiento forzoso en su sentido másamplio se centra en cuatro cuestio-

nes: (1) el desplazamiento coercitivo yempobrecedor por causa del desarrollo;(2) la persecución política que tienecomo resultado el desplazamiento con-trolado; (3) desplazamientos laboralesmasivos; (4) el desplazamiento porcausa de losdesastres. Esteartículo estudiael papel delEstado en el des-plazamiento,centrándose enla primera deestas cuestiones:el desplazamien-to por causa deldesarrollo.

Introducción

En el contextochino, destacanlas lagunas en ladefinicióncomún de des-plazamiento, enconcreto por loque se refiere ala referencia alos métodos depersecución noreconocidoscapaces de obli-gar al desplaza-miento. En losúltimos años, sinembargo, lainformacióncompleta y rigu-rosa sobre estasy otras facetas de la situación chinarelativa a los derechos humanos ha sidoimposible, ya que la mayoría de lasredes chinas que tienen como objetivola verificación de las denuncias de dere-chos han sido prohibidas. Por este moti-vo, una de las pocas medidas diplomáti-cas disponibles que la comunidad inter-nacional tiene para llamar la atenciónsobre el problema de los desplazadosinternos (DI) en China sería aumentar elcontenido de los criterios que definen alos DI.

El omnipotente y único aparato de segu-ridad del Estado en China es totalmentecapaz de suprimir los mayores despla-zamientos internos y las huidas trans-

fronterizas de refugiados desde lasregiones más disidentes. Las barrerasgeográficas que impiden la salida delpaís son también obstáculos significati-vos. Los que huyen del Tíbet debensoportar un peligroso viaje de hastacuatro meses expuestos a temperaturasbajo cero. Las fronteras de Xinjiang conAsia Central son casi imposibles de cru-

zar, y la frontera con Paquistánestá siendo ahora impermeabili-zada con alambre de espino. Sehan producido casos de devolu-ciones de números pequeños derefugiados que entraron recien-temente en Paquistán, y hacomenzado la cooperación bila-teral en cuestiones de seguridadcon los gobiernos de la CEI, rela-tiva a la supresión de gruposdisidentes. El gobierno lleva acabo prácticas de persecuciónpolítica que conducen a despla-zamientos controlados en elinterior de sus fronteras, peromuchos de estos casos proba-blemente no son denunciados.

Además, cuando el desplazamientotiene una causa oficialmente benigna,como en el caso del desplazamiento porcausa del desarrollo, el resultado puedeser políticamente coercitivo. Durantelos primeros 40 años después de larevolución de 1949, China reasentaba auna media de 800.000 personas al añopor cuestiones relacionadas con el desa-

rrollo, algunas deforma voluntaria,muchas otras no.Durante los últi-mos años, lamedia ha crecidode manera induda-ble, ya que laactual operaciónque desplazará a1.200.000 perso-nas o más de lazona de la presade la TresGargantas es elmayor reasenta-miento de la histo-ria debido a laconstrucción deuna presa. En elreasentamientoinvoluntario, elrecurso frecuentedel Gobierno alMinisterio de

Las Tres Gargantas: el coste noestudiado del desplazamiento por causa del desarrollo por Martin Stein

“Una esmerada coreografía de apisonadorasy camiones sellará hoy en sólo seis horas ymedia la suerte de milenios de historia china,y establecerá una colosal incertidumbre parael futuro. A medida que una cascada dehormigón y roca tapona la última brecha de40 metros de una presa sobre el río Yangtsé-la primera etapa de la presa más grande ymás controvertida del mundo-, el proyectomás ambicioso de China desde la GranMuralla habrá cruzado elpunto de no retorno”.The Guardian, 8 denoviembre de 1997

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desplazamiento internosección

Seguridad Pública intimida a los despla-zados, de manera que las operacionesparecen ordenadas. En el caso de rea-sentamiento voluntario, que ocurreprincipalmente en las operaciones anti-pobreza, los observadores internaciona-les confiesan en privado que el término“voluntario” tiene un significado dife-rente en el contexto chino, en el que lafuerte coerción estatal priva a los afec-tados de la posibilidad de oponerse.

El reasentamiento coercitivopor causa del desarrollo

El desplazamiento de la presa de lasTres Gargantas es cuatro veces mayorque el último gran desplazamiento depoblación causado por el desarrollo anivel mundial, que también se produjoen China. La operación desplazará lapoblación de 17 ciudades grandes y 109núcleos urbanos más pequeños, obli-gando a 1.200.000 de personas o más acumplirlo sin poder recurrir la decisión.Las evaluaciones del Banco Mundial deotros reasentamientos a gran escalaprovocados por la construcción de pre-sas en China indican una pauta constan-te de fracasos:

“El fracaso a la hora de implicar a laspersonas en la selección de diseñoscondujo a un rechazo casi total de lascasas construidas por el contratista...”(Daguangba) 1

“Las poblaciones de acogida estánsufriendo tasas de desempleo muy ele-vadas y la mayoría continúan depen-diendo de las raciones de grano delGobierno... (Yantan) 2

“El 60% de los reasentados todavía vivenpor debajo del umbral de la pobreza...”(Wuqiangxi) 3

Además, muchos de los que fuerondesarraigados por la construcción depresas en los primeros momentos de laRepública Popular, todavía protestandiscretamente por su continuo estadode empobrecimiento, especialmente enDongpinghu, en Shandong (que recibióa 278.000 reasentados), Xinanjiang, enZhejiang (306.000), Sanmenxia, enHenan/Shanxi (319.000), Jinzhai, enAnhui (100.000), Xinfeng, en Guangdong(293.000), y Danjiangkou, en Hubei(383.000).

El Banco Mundial cita un estudio chino,al evaluar los efectos de la construcciónde presas durante 30 años, que afirmaque sólo un tercio de los reasentados ha“estabilizado su vida a niveles satisfac-torios”; otro tercio tiene sólo “mediosde subsistencia”; y el tercio restanteestá “anclado en la pobreza” 4. ElGobierno tiene todavía mayores antece-

dentes en lo que respecta al reasenta-miento urbano, y el relacionado con eltransporte y la industria rurales, queperjudican en menor medida a las rentasde las poblaciones de acogida, se gestio-nan localmente, y están supeditados conmenor frecuencia a pautas políticas. Apesar de ello, los problemas chinosdebidos al reasentamiento causado porla construcción de presas son agudos.

Las razones del empobrecimiento, ade-más de la forma de tomar decisiones yde la falta de consideración de los agra-viados, derivan de la incapacidad de laseconomías locales cercanas a las presaspara mantener a los desplazados. No esprobable que el desplazamiento de lasTres Gargantas obtenga mejores resulta-dos con respecto a la rehabilitación dela renta que los proyectos anterioresque fueron mal gestionados.

El reasentamiento urbano

La operación de las Tres Gargantassumergirá 1.600 empresas y fábricas. Eldesplazamiento hacia las zonas urbanasdependerá de la capacidad de absorcióndel empleo de (i) las empresas jóvenessubvencionadas, que tienen un alto ries-go de fracaso, y (ii) las empresas estata-les endeudadas y no competitivas inter-nacionalmente, con crecientes exceden-

tes laborales. El desplazamiento coinci-de con el cierre de algunas de las prin-cipales empresas estatales y despidosmasivos que se espera se extiendan portoda la economía china. A medio plazo,antes de que lleguen las bancarrotas,las presiones del mercado obligarán alos directores a recortar salarios,poniendo a los trabajadores originalesde la industria en riesgo de empobre-

Varios informes periodísticos sugieren que los pagoscompensatorios anunciados sirven como señuelos,mientras que las promesas son frecuentemente incum-plidas.

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Empieza lainundaciónCon un coste de 25.000 millones de dólares,se espera que la presa esté terminada en el año 2009, anegando más de 140 núcleos urbanos y produciendo el desahucio forzoso de 1,2 millones de personas.

Zona inundadaEl mar interior tendrá más de 1.000 km2,cuatro veces más que la isla de HongKong

SandoupingBarrera de roca (ataguía) construida sobreel Yangtsé con anterioridad a la construc-ción de la presa

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desplazamiento internosección

cerse también. Las presas y los embal-ses en China, como en todas partes,están raramente localizadas donde lascondiciones del mercado son favora-bles, sino que “se encuentran normal-mente en terrenos escabrosos alejadosde los mercados principales” 5. En lazona de las Tres Gargantas, el gobiernoha conferido a Chongqing la condiciónde municipio paralelo al de ciudadescomo Beijing, Shangai y Tianjin, exentasde aprobación central previa para lainversión privada. Sin embargo, hayperspectivas sólo limitadas con respec-to a la atracción de inversores privados:el canal de mercancías del Yangtsé noexistirá hasta dentro de 15 años.Durante dos décadas más, la zona delas Tres Gargantas seguirá siendo unmercado interno, de difícil acceso paraaquellas industrias que evalúan elpotencial local para las inversiones.

El reasentamiento rural

Los desplazados a zonas rurales seenfrentan también a perspectivas eco-nómicas desfavorables. En la mayoríade los desplazamientos, las poblacionesrurales son relegadas a laderas ybarrancos, que se encuentran disponi-bles sólo si en el pasado no pudieronmantener a una población campesina.En la zona de las Tres Gargantas, sólo1.500 hectáreas de nuevas tierras hansido reclamadas, frente a las 3.000 queserán sumergidas. Muchos de los des-plazados están siendo hacinados enzonas más altas alrededor de la reserva,donde entre el 30 y el 50% de la tierraes cultivada en laderas de más de 25grados de inclinación, lo que implica laexistencia de graves problemas de ero-sión y de productividad tanto para losdesplazados como para los residentesanteriores. El Estado también prevé unamezcla insostenible de cultivos. La pro-ducción de cítrico, considerada unapanacea, sufrirá con la altitud de lasnuevas comunidades desplazadas,sometida a las heladas en los durosinviernos continentales. Además, lasbajas rentas de los productores de cítri-cos eran ya comunes en China con ante-rioridad al plan de las Tres Gargantas,debido a una excesiva confianza enotras zonas en las que se habían necesi-tado proyectos de rehabilitación de ren-tas. Para agravar más el efecto empo-brecedor del desplazamiento, seencuentran las cargas soportadas porlas poblaciones campesinas vecinas porel aumento de la competencia de losprecios; muy pocas de estas poblacio-

nes están incluidas en los presupuestosrelativos a los esquemas de compensa-ción por el reasentamiento de manerasignificativa.

Compensación y reclamaciones

En último lugar, no está claro que lacompensación planeada por el gobiernoen relación con el desplazamiento delas Tres Gargantas se vaya a materiali-zar como se ha anunciado. A principiosde 1996, apenas el 7,5% de los fondospara el reasentamiento se había gastadopara el desplazamiento de sólo el 1,5%de la población prevista. Un estudioprevé un coste máximo del desplaza-miento de 195 millones de yuans, aun-que sólo están presupuestados 40.000millones 6. Varios informes periodísticossugieren que los pagos compensatorios

anunciadossirvencomoseñuelos,pero quelas prome-sas son fre-cuentemen-te incumpli-das.

Mientrasque los

recursos y las protestas parecen apro-piadas con respecto a las TresGargantas y a otras operaciones de des-plazamiento, el Gobierno anula dehecho los derechos de las comunidadesdesplazadas. En primer lugar, las nor-mas de 1991 sobre el reasentamientopor construcción de embalses excluíanexplícitamente a todos los reasenta-mientos debidos a la construcción depresas en China vinculados con objeti-vos de desarrollo, afirmando que lasnormas del reasentamiento deben sersólo adecuadas “para asegurar que lavida de los reasentados alcance o supe-re gradualmente su nivel anterior”. Ensegundo lugar, las garantías legales eje-cutables para las poblaciones desplaza-das no pueden encontrarse en la norma-tiva estatal sobre el reasentamiento delas Tres Gargantas (y presumiblementede otras operaciones de reasentamientoen China). En tercer lugar, el BancoMundial descubrió que prácticamentetodas las vías legales para plantearrecursos eran suprimidas en los proyec-tos de origen estatal, como las presas,ya que “esos elementos del reasenta-miento considerados como cuestionesde política estatal (incluyendo nivelesde compensación generales) están másallá de cualquier cuestionamiento” 7. Laevaluación del propio Banco Mundialcon respecto al proceso legal chinosobre cuestiones de reasentamientosugiere que el Estado silencia los recur-sos de manera consciente: “Los infor-mes no distinguen a aquellos que vie-ron reconocidas sus reclamaciones totalo parcialmente de los que no recibieroncompensación... la oferta final de laagencia de reasentamiento en el proce-

so de mediación raramente se modifi-ca”. En cuarto lugar, el Banco Mundialobservó que las condiciones no permi-ten el establecimiento en China deobservadores independientes del des-plazamiento: “Una revisión de dichasactividades de control llevada a cabocomo parte de esta revisión del reasen-tamiento en general, pone de manifiestola inexistencia de un solo esfuerzo quehaya tenido éxito”.

Los desplazamientos anteriores porcausa de las presas han sido política-mente incendiarios. Las presas deSanmenxia, Xinanjiang y Danjiangkou,construidas en los 60, desplazaron cadauna a de ellas más de 300.000 personas,produciendo no sólo un empobreci-miento extendido, sino un movimientoconstante de solicitantes (shangfang).Incluso las presas chinas más pequeñas,que reasentaron sólo a varios cientos depersonas, tales como el embalse deXinhua, en el condado de Wushan, y elembalse de Baishi, en el condado deZhong, según funcionarios de seguridadanónimos, “han sido la causa constantede disturbios masivos frecuentes, noprecisamente a pequeña escala” 8

La resistencia pasiva a las nuevas condi-ciones del reasentamiento incluye elrechazo frontal a marcharse y a aceptarnuevos trabajos. Unos pocos altos car-gos importantes se encuentran entre laspersonas privadas de libertad debido asu oposición al proyecto de las TresGargantas, incluyendo a Li Rui, el ante-rior secretario de Mao y viceministro derecursos hidráulicos, y el periodista DaiQing, autor del manifiesto prohibidoYangtsé! Yangtsé! El río dragón ha llega-do, de Dai Qing, publicado en noviem-bre de 1997, recoge una oposición másreciente a las condiciones de reasenta-miento de las Tres Gargantas. Dentrodel gobierno, existe una oposición sus-tancial silenciosa a realizar la operaciónde las Tres Gargantas basándose tantoen las condiciones del desplazamientocomo en el daño medioambiental pre-visto. Sometido a votación en elCongreso Popular Nacional en 1992, untercio de los miembros votó oponiéndo-se o se abstuvo, lo que supuso unhecho sin precedente 9.

Conclusión

Muchos hallazgos -incluyendo los delBanco Mundial- sugieren que el reasen-tamiento en China tiene a menudocomo consecuencia el abandono de unparte muy grande de los desplazados encondiciones de empobrecimiento cróni-co. Así, a pesar de que el desplazamien-to por causa del desarrollo queda técni-camente fuera de la definición de DIactualmente en uso en Naciones Unidas,hay problemas a gran escala comoresultado de garantías pobremente con-cebidas y una falta perversa de respues-ta administrativa a los grupos agravia-dos. Si no se perciben los factores coer-citivos, las fuerzas administrativas quetrabajan en el desplazamiento parecen

…el Banco Mundial descubrió que práctica-mente todas las vías legales para plantearrecursos eran suprimidas en los proyectos deorigen estatal, como las presas.

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MIGRACIONES FORZOSAS revista10 enero - abril 1998, 1

desplazamiento internosección

Esto se debe, por lo menos en parte,a que es poco probable que los paí-ses que experimentan crisis de des-

plazamiento interno posean las institu-ciones a nivel interno capaces de pro-porcionar eficazmente a sus ciudada-nos desplazados el apoyo necesario.Reforzar la capacidad nacional de res-puesta es esencial para que los propiosgobiernos asuman la responsabilidadinmediata en las emergencias humani-tarias sin tener que depender de laayuda externa. En los países que expe-rimentan desestabilidad política y eco-nómica, el propio acto de estableceruna institución es significativo, ya queimplica el reconocimiento por parte delgobierno del problema del desplaza-miento interno. La eficacia de la res-puesta de un país puede estar influidapor varios factores:

La etnicidad de los desplazados

En los casos en que las acciones guber-namentales han causado el desplaza-miento de grupos étnicos determinados(como en Sudán, Birmania y Turquía)resulta dudoso que se pueda contarcon que esos mismos gobiernos ayudena los desplazados. Las autoridades pue-den estar más motivadas para ayudar alas personas que pertenecen al mismogrupo étnico que la mayoría: en Chipre,por ejemplo, las autoridades greco-chi-priotas y las turco-chipriotas crearonprogramas de asistencia para los des-plazados pertenecientes a sus relativosgrupos étnicos en la isla [1].

Consideraciones y prejuiciospolíticos

Por el contrario, consideraciones detipo político han evitado que el gobier-

no de Azerbayán tome un papel activoen la ayuda a sus ciudadanos desplaza-dos, aunque son étnicamente azerbaya-nos. Mientras que la gente local ha reci-bido a los desplazados con hospitali-dad, el gobierno de Azerbayán no hadado pasos para profundizar la integra-ción local, y parece preferir que estaspersonas continúen desplazadas hastaque la resolución de la disputa conArmenia permita el retorno a Nagorno-Karabaj y sus zonas limítrofes [2].

En Colombia, muchos miembros delgobierno ven a los desplazados inter-nos con recelo, y algunos funcionariosconsideran que los desplazados sonsubversivos [ver el artículo de SeánLoughna en págs. 15-16]. A pesar de laprofusa creación de agencias para tra-tar las cuestiones relacionadas con losderechos humanos y el desplazamien-to, las actitudes políticas han contribui-do a crear una “brecha evidente entrelas intenciones y la actuación” [3].

En Perú, el Estado está preocupado porcontrolar la urbanización y devolver alos desplazados a sus lugares de ori-gen. En consecuencia, la única agenciadel gobierno dirigida a asistir a los des-plazados internos, el Proyecto deApoyo a la Repoblación (PAR), ayuda alos retornados y a los desplazadosinternos que aceptan volver a las zonasrurales, pero no a aquellas que eligenreasentarse en otras zonas. Incluso hapresionado a algunas comunidadespara que vuelvan a pesar de las preca-rias condiciones [4].

Esfuerzos de coordinación ycomunicación

La creación de “bases” en los gobiernospara tratar el desplazamiento promue-ve la coordinación y facilita la capaci-

La respuesta nacional al

En muchos casos, la comunidadinternacional actúa para proteger y asistira los desplazados internos del mundoante la ausencia de responsabilidad y deacción nacional efectiva.

sinceras y perfectamente respetuosas delas normas. Pero, en realidad, existe unaenorme capacidad de persecución queopera “subrepticiamente” en las cuestio-nes relativas al desplazamiento.

Martin Stein pertenece alDepartamento de RelacionesInternacionales de la Universidad deYale. Anteriormente fue Coordinadorsobre el Terreno en China de losVolunteers in Asia (una ONG apolíti-ca). Puede contactarse con él porcorreo electrónico en:[email protected]

El manual de 1998 del Global IDPSurvey, Internally displaced people: aglobal survey, contiene un informe deMartin Stein sobre los cuatro aspectosdel desplazamiento interno en China, yamencionado en la introducción de esteartículo. Más detalles en la página 41.

Para más información sobre las TresGargantas:International Rivers Network, ThreeGorges Campaign: http://www.irn.org/programs/3g/Probe International, Three GorgesCampaign: http://www.nextcity.com/ProbeInternational/ThreeGorges/

Notas1. World Bank Environment Department,“Resettlement and development: the Bankwidereview of projects involving involuntary reset-tlement”, 1986-1993, 8 de abril de 1994, 6/11.2. Yo Kimura y Lee Travers, World Bank Chinaand Mongolia Department, “China involuntaryresettlement”, 8 de junio de 1993, p. 37.3. “Wang Maolin addresses Hunan resettlementconference”, Hunan Ribao, 15 de noviembre de1996, p. 1.4. “Selected essays on reservoir resettlementand poverty alleviation”, Ministry of WaterResources Resettlement Office, octubre de 1988,p. 142.5. Yo Kimura y Lee Travers, “China involuntaryresettlement”, World Bank China and MongoliaDepartment, 8 de junio de 1993, p. 37.6. Samuel Wang, “Migration for flood control”,China Strategic Review, nº 3, abril de 1996.7. Referencias y citas de Yo Kimura y LeeTravers, ver supra, p. 12.8. “Three Gorges Resettlement expected tospawn massive civil unrest”, Three GorgesBackgrounder, nº 26, Probe International, 15 demarzo de 1995.9. Audrey Topping, “Ecological roulette: dam-ming the Yangtze”, Foreign Affairs,septiembre/octubre de 1995.

Se puede acceder a losartículos de la Revista

sobre MigracionesForzosas (en inglés) en laspáginas de la FMR en la

página web del RSP en: http://

www.qeh.ox.ac.uk/rsp/

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dad del ACNUR para comunicarse efi-cazmente con los gobiernos, en lugar detener que enfrentarse a un desplieguede burocracias confusas que hacen per-der un tiempo precioso [5]. EnTayikistán, la existencia delDepartamento Central de Refugiados deTayikistán facilitó al ACNUR, junto conlos funcionarios, la realización de ope-raciones de suministro de asistencia alos desplazados internos del país.

En Sri Lanka, el punto central es elMinisterio de Reconstrucción,Rehabilitación y Servicios Sociales. Unprograma del Ministerio coordina laayuda gubernamental y de la comuni-dad internacional y mantiene cientos decampos y de centros de acogida queasisten a más de 250.000 desplazadosinternos. Los obstáculos burocráticos yla dispersión de la ayuda han limitadoalgunas veces la efectividad ministerial,y se sabe que el Gobierno restringe laayuda a los desplazados tamiles [6]. Sinembargo, Sri Lanka constituye un buenejemplo de un gobierno que ha asumidola responsabilidad de sus desplazados yretornados, y que ha establecido institu-ciones estatales para tratar sus necesi-dades.

La implicación de lacomunidad internacional

La comunidad internacional puede, enla mayoría de los casos, proporcionarapoyo al alentar a los gobiernos a desa-rrollar y reforzar las institucionesnacionales y, en la medida de lo posi-ble, al controlar las actividades de estasinstituciones. La Oficina deCoordinación para la AyudaInternacional Humanitaria de Georgiafue establecida en 1995, con financia-ción de las organizaciones internaciona-les, para asistir a todas las categorías

de personas necesitadas deGeorgia. La agencia tienecomo mandato la coordina-ción de todos los progra-mas de las organizacionesinternacionales y de lasONG, y con el apoyo de laOrganización Internacionalpara las Migraciones, elDepartamento de AsuntosHumanitarios de NacionesUnidas y el Gobiernonoruego, publica un infor-me anual que recoge losprogramas de ayuda enGeorgia e incluye comenta-rios útiles sobre la asisten-cia actual [2].

El Programa de Acción elabo-rado en mayo de 1996 en la conferenciaregional de la CEI sobre desplazamientodebate la importancia de estableceragencias de inmigración de alto nivelpara “desarrollar las políticas y coordi-nar todos los órganos gubernamentalesrelevantes”[7]. Manifiesta que tales órga-nos podrían resultar de gran ayuda paraidentificar el destino de la ayuda huma-nitaria y facilitar el trabajo de las orga-nizaciones internacionales y de las

ONG. Las organizacio-nes internacionalesestán invitadas a desa-rrollar programas decooperación técnicapara asistir a losgobiernos de la CEI enel refuerzo de su capa-cidad de gestión y eldesarrollo de sus siste-mas de información.

La situación de losdesplazados internos se verá obviamen-te afectada por la motivación de losgobiernos en la creación de institucio-nes nacionales, y en la voluntad políticapara poner en marcha los mandatos deestas instituciones. La comunidad inter-nacional tiene un interés claro en per-suadir a los países para que mejoren surespuesta a las crisis del desplazamien-to interno y asumir una mayor respon-sabilidad con respecto a sus propiaspoblaciones desplazadas. Institucionesinternas más fuertes reducirían el ries-go de dependencia con respecto a laasistencia humanitaria y facilitarían lasolución de las dificultades de coordi-

nación entre los gobiernos y las agen-cias internacionales. Sobre todo, institu-ciones más responsables ayudarían aasegurar que los desplazados internosno sean olvidados.

Jennifer McLean es InvestigadoraAyudante en el Instituto Brookings ytrabaja en el Proyecto del InstitutoBrookings sobre el DesplazamientoInterno. Acompañó al RepresentanteEspecial del Secretario General deNaciones Unidas para losDesplazados Internos en su misiónen Tayikistán en 1996.

Notas[1] Cohen, R. y Deng, F.M. “Global Overview”, enMasses in Flight: The Global Crisis of InternalDisplacement. The Brookings Institution, (enprensa)[2] Greene, T. “Internal Displacement in theNorth Caucasus, Azerbaijan, Armenia, andGeorgia”, en Cohen, R. y Deng, F.M. (eds.). TheForsaken People: Case studies of the internallydisplaced. The Brookings Institution (en prensa).[3] Comisión de Derechos Humanos de NacionesUnidas. Informe del Secretario General sobre elDesplazamiento Interno. Profiles inDisplacement: Colombia. Doc. NUE/CN.4/1995/50/Add.1, de 3 de octubre de1994, p. 36.[4] Stavropoulou, M. “Will Peru’s DisplacedReturn?”, en Cohen, R. y Deng, F.M. (eds.). TheForsaken People… op. cit.[5] Véase McLean, J. y Greene, T. “Turmoil inTajikistan: Addressing the Crisis of InternalDisplacement”, en Cohen, R. y Deng, F.M. (eds.).The Forsaken People... op. cit.[6] Seneviratne, H.L. y Stavropoulou, M. “SriLanka’s ‘Vicious Circle’ of Displacement”, enCohen, R. y Deng, F.M. (eds.). The ForsakenPeople... op. cit.[7] Programa de Acción de la Conferencia de laCEI, CISCONF/1996/5, párrafos 50, 52 y 126.

MIGRACIONES FORZOSAS revista 11enero - abril 1998, 1

desplazamiento internosección

por Jennifer McLean

desplazamiento interno

Desplazados internos de Lachin, Nagorno-Karabaj, en Adghebedi, Azerbayán

La comunidad internacional tiene uninterés claro en persuadir a los paí-ses para que mejoren su respuesta alas crisis de desplazamiento interno

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Durante décadas, la región del sur deÁfrica se ha visto envuelta en numero-sas crisis políticas que han dado lugar aenormes poblaciones de DI. La granmayoría de estas poblaciones continúan,incluso hoy, sin ser reconocidas ni asis-tidas. Sin embargo, durante los últimosaños, y liderado en gran medida por laemergencia de la democracia enSudáfrica, ha crecido la concienciaciónde que los secretos oficiales del pasadodeben salir a la luz. El fin de las guerrasciviles en Angola y Mozambique, laaceptación creciente de un plan deacción de derechos humanos para laregión, y una solución regional paradesarrollar parámetros de democracia yparticipación, han producido un nuevo

compromiso con una valoración hones-ta de responsabilidades pasadas.Aunque existe una convicción crecientede que la situación de los DI de laregión debería ser tratada, hay muypoca información disponible que sirvade base al desarrollo de estrategias deintervención. Éste es un legado tanto deun entorno difícilmente investigablecomo de una burocracia muy hostil.

El problema de los DI existe en toda laregión del sur de África. En la propiaSudáfrica, dos fuentes distintas de des-plazamiento han sido las políticas delapartheid de desplazamiento forzoso yla violencia racial apoyada por elgobierno, que en conjunto han creado

una población de DI que el Comité paraRefugiados de EE.UU. estima en unas500.000 personas aproximadamente [1].A lo largo de los años, las guerras civi-les en Angola y Mozambique han gene-rado millones de desplazados. EnMalawi, la carga de acoger a los refugia-dos mozambiqueños condujo a unasituación en la que los nativos deMalawi se vieron empobrecidos y enalgunos casos incluso desplazados debi-do a la carga de acomodar refugiadoscon poca ayuda internacional [2, 3].Tanzania sufrió durante dos décadas unproblema de desplazamiento internotras las prácticas de concentración enaldeas de la población rural dispersa delos 70. En Zimbabwe, las masacres delos zano en Matebeleland generarongrandes desplazamientos de personas,sobre los que no hubo información,muchas de las cuales continúan despla-zadas todavía hoy [4]. La RepúblicaDemocrática del Congo (el antiguoZaire) -el miembro más reciente de laComunidad de Desarrollo del Sur deÁfrica- se está recuperando de meses deguerra civil que han dejado grandesnúmeros de desplazados.

Aunque la mayoría de los países de laregión tienen posturas bien definidascon respecto a la asistencia a los refu-giados, ninguno ha empezado a tratarlas necesidades de los DI. La política derefugiados de Sudáfrica se considerarelativamente liberal por lo que se refie-re a su aceptación de los refugiados yde los derechos de los solicitantes deasilo, pero ignora a los desplazados enel interior de sus propias fronteras. Esteolvido hace surgir la cuestión del moti-vo que yace tras las garantías de asis-tencia a los refugiados internacionales:¿es solamente político, con la finalidadde convencer a la comunidad interna-cional de que Sudáfrica respeta losderechos humanos y el derecho interna-cional consuetudinario? La continuanegligencia con respecto a los DI sugie-re también que el gobierno actual no escapaz, o no tiene voluntad, de tratarefectivamente con la constante violen-cia étnica dentro del país.

Aunque el problema de los DI se ve nor-malmente desde una perspectiva regio-nal e incluso nacional, el mayor impacto

Vivir en la sombra: los desplaza-dos internos en el sur de África

por Marion Ryan Sinclair

El Centro para Estudios sobre el sur deÁfrica de la Universidad de Western Capeha iniciado recientemente un proyecto deinvestigación sobre la extensión,condiciones y pronóstico del fenómeno delos desplazados internos (DI) en los paísesdel sur de África.

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se manifiesta normalmente en el ámbitolocal. En Sudáfrica, la región deKwazulu-Natal ha generado las cifrasmás altas de DI durante los últimosaños de la década de los 80 y a princi-pios de los 90. La amplia mayoría deestas personas desplazadas ha huido alas zonas metropolitanas de Durban yde Pietermaritzburg, y es principalmen-te en la periferia urbana de estas dosciudades donde se siente el impacto dela migración forzosa. A pesar de ello,paradójicamente, es aquí donde los des-plazados tienden a hacerse invisibles,debido en parte a su propia voluntad yen parte a que la investigación y lasagendas políticas han decidido que noson una prioridad.

En el caso de Durban, decenas de milesde DI [5] han sido absorbidos en la ciu-dad, aumentando significativamente lascifras de personas sin hogar y el nivelde desempleo, y dando lugar a conflic-tos por causa de las limitaciones de tra-bajo, alimentación y alojamiento. Enausencia de fuentes oficiales de asisten-cia a los DI, varias organizaciones priva-das pequeñas han surgido de entre lapropia gente. Éstas ofrecen poco másque un sentimiento común de historia yexperiencia, aunque al menos una de lasorganizaciones ofrece más asistenciatécnica y práctica a través de formacióny de servicios de alojamiento. Hay dosretos inmediatos que son el alojamientoy el trabajo de los recién llegados DI, ala vez que la necesidad a largo plazo de

tratar losefectos psi-cosocialesde la vio-lencia queprecipita-ron su

huida, quesiguen sin

ser estudia-dos. Para la

gran mayoría de estos refugiados, estanecesidad sigue sin ser tratada inclusotras llevar muchos años en la ciudad.

El olvido de los DI puede atribuirse enparte a los grandes obstáculos que exis-ten a la hora de calibrar la extensión delproblema. Existe también una falta dedeseo, extendida y sorprendente, de tra-tar esta cuestión. En gran medida, losdesplazados fueron motivo de interéssólo temporalmente, objeto de unaatención menguante por parte de la opi-nión pública y de una preocupación que

brilló por su ausencia. Para los despla-zados existe casi siempre un largo lega-do de pobreza y de pérdida de la fami-lia y la comunidad, además de pocaasistencia, o ninguna, para afrontar losgrandes impactos materiales y psicoso-ciales. La negación de reconocimientooficial de los DI en Sudáfrica ha tenidocomo consecuencia que su cuidadohaya tendido a caer fuertemente sobrelas comunidades. En efecto, los despla-zados han buscado generalmente asiloen las comunidades locales, en lugar deen el Estado o, simplemente, se las hanarreglado por sí solos. Los gobiernos dela región han logrado crear enormespoblaciones de DI e ignorar despuéssus necesidades materiales, con un grancosto para muchas comunidades loca-les. A medida que los gobiernos de laregión se mueven hacia la adopción deparámetros internacionales de asisten-cia para los refugiados y los DI, la cues-

tión de la responsa-bilidad del gobier-

no necesitará

ser tratada, a la vez que se deberánvalorar los costes soportados por lascomunidades por la asistencia prestadaen el pasado y, cuando sea necesario,habrán de ser compensados.

En casi todos los casos, los propiosgobiernos de los DI no les han propor-cionado asistencia y protección básicas,debido tanto a una falta de recursoscomo a la conveniencia política de igno-rar su situación. Situación que se agravano sólo por la restricción frecuente deinformación en la prensa, que refuerza

su posición de descuido internacional,sino también por el hecho de que nin-guna norma internacional, ni el derechointernacional consuetudinario, disponenque fuerzas externas vengan en suayuda.

El reconocimiento internacional de laexistencia de los DI en el sur de África,su importancia numérica y las violacio-nes de derechos humanos que implican,son de vital importancia. La conciencia-

ción pública sigue siendo baja,principalmente porque ningu-na organización se ha hechocargo de dar publicidad aesta cuestión o de lucharpor su resolución. A nivelglobal, sin embargo, los DIestán ganando lentamente

…los desplazados fueron motivo de interés sólo tem-poralmente, objeto de una atención menguante porparte de la opinión pública y de una preocupaciónque brilló por su ausencia.

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la simpatía política. Existe una presióncreciente en Naciones Unidas para rede-finir el mandato del ACNUR con el finde que incluya a los DI, a pesar de lapresión conservadora creciente queaboga por una restricción mayor de lasobligaciones del ACNUR de encargarsede los refugiados internacionales exclu-sivamente. Es previsible que este debatecontinuará en el futuro, y seguirá sien-do una cuestión académica al menoshasta que haya más fondos disponiblespara operaciones humanitarias. Entretanto, y a pesar de la falta de un man-dato claro que permita la acción conrespecto a los DI, las Naciones Unidas yotras agencias han desempeñado enocasiones un papel muy importante enla asistencia a los desplazados internos.Los ejemplos incluyen operacionestransfronterizas (tales como las deAfganistán y Sudán [6]), la extensión defacto del mandato del ACNUR paraincluir a los DI y a los refugiados repa-triados (por ejemplo en Mozambique yEl Salvador), y la intervención del

Comité Internacional de la Cruz Roja.

Aunque los ejemplos aislados de asis-tencia a los DI proporcionan la protec-ción y ayuda necesarias, no son sufi-cientes ni estratégicamente efectivos.En palabras de Lance Clark, “mientrassigamos tratando cada uno de estosejemplos como casos aislados y por lotanto continuemos aplicando respuestasad hoc en lugar de sistemáticas, estare-mos condenando a millones de perso-nas cada año a un sufrimiento innecesa-rio” [7]. El llamamiento a NacionesUnidas para que establezca un órganocon el mandato de continuar y ampliardicho trabajo es triste y claramente tar-día.

Los mayores obstáculos logísticos paraproporcionar asistencia a los DI derivandel hecho de que, aunque las agenciasinternacionales para los refugiados tie-nen como mandato la asistencia a losdesposeídos y los desplazados, puedenhacerlo sólo cuando se lo piden y sólo

cuando dichos desplazados han cruza-do una frontera. Aunque ha habido lla-madas para el establecimiento de unaposición regional común sobre los refu-giados internacionales en el sur de Áfri-ca -a pesar de que las realidades políti-cas y económicas de la región la hacenimprobable y posiblemente poco inteli-gente en el momento actual-, el trato alos DI es en último término una cues-tión de política interna. Esto, a su vez,depende de la voluntad de los gobier-nos de la región de reconocer el proble-ma de los DI en sus respectivos países.

Sudáfrica se encuentra actualmente enel agitado proceso de diseñar una leysobre refugiados, y aunque no trataexplícitamente la cuestión de los DI, elclima de interés público en cuestionesde desplazamiento en general hace queel momento sea oportuno para tratar lacuestión de los DI tanto a nivel de opi-nión pública como a nivel oficial. Elobjetivo final debería ser la puesta enpráctica de nuevas leyes dirigidas a laprotección y asistencia de los DI, y laobtención del compromiso del gobiernopara hacer frente a los problemas quepuedan dar lugar a nuevos flujos de DIen el futuro.

En la consideración de la legislaciónparalela para tratar a los refugiados y alos DI, se hace una advertencia impor-tante, es decir, la necesidad de igualarel trato y la consideración de ambosgrupos. La idea no es insistir en que losDI necesitan más asistencia, o que sonmás importantes porque son del lugar,sino conferir un status y una asistenciaiguales sobre todos aquellos que se hanvisto obligados a reinstalarse, indepen-dientemente de su origen o destinofinal.

Marion Ryan Sinclair esInvestigadora y Jefa del Programasobre Migración Forzosa en elCentro para Estudios Sudafricanos,Universidad de Western Cape,Sudáfrica.

Notas[1] Comité para Refugiados de EE.UU. WorldRefugee Survey, 1997, p. 6.[2] Chirwa, W.C. From Neighbours and Relativesto Refugees: The Story of Mozambicans inMalawi. Centre for Southern African StudiesWorking Paper.[3] Dzimbiri, L.B. Managing Refugees in Malawi-an overview, Department of PublicAdministration, Chancellor College, Zomba,Malawi, 1992.[4] Weekly Mail & Guardian, Johannesburgo,Sudáfrica, 2 de mayo de 1997.[5] Mary de Haas, UN Peace Monitor [perscomm], Durban, Octubre 1996.[6] Minear, L. Humanitarianism under seige: Acritical review of Operation Lifeline Sudan.Trenton Red Sea Press, NJ, EE.UU., 1991.[7] Clark, L. International Refugees. The HiddenHalf. World Refugee Survey-1988 (en proceso derevisión), p. 19, 1988.

MIGRACIONES FORZOSAS revista14 enero - abril 1998, 1

desplazamiento internosección

Journal of Refugee StudiesVol. 10, nº 4, 1997

Rethinking mental health work withsurvivors of wartime violence and refugeespor P. Bracken, J.E. Giller y D. SummerfieldAmbivalent incorporation: Norwegianpolicy towards Tamil asylum seekers fromSri Lankapor Øivind FuglerudIncome-generating programmes inPakistan and Malawi: a comparativereviewpor Are J. Knudsen y Kate HalvorsenVoluntary and fictive repatriation amongexecutives in Eastern Europe from anethnographic perspectivepor André P. Czegledy

Vol. 11, nº 1, 1998

Between right and realisation: the PLOdialectics of the right to returnpor Menachem KleinRisk factors and protective factors inCentral American and Southeast Asianrefugee childrenpor Celine Rousseau, Aline Drapeau y EllenCorinResettlement of Middle Eastern refugees inFinland: the elusiveness of integrationpor Kathleen ValtonenUnsettling admissions: asylum seekers inAustraliapor Glenn Nichols

Directores:Roger Zetter, Richard BlackDirector de las reseñas bibliográficas:Nicholas Van Hear

Para más información sobre el JRS:Journals Marketing, Oxford University Press,Great Clarendon Street, Oxford OX2 6DP,Reino Unido. (por favor, cite la referenciaFMR)Tel: + 44 1865 267907Fax: + 44 1865 267773

Cuotas de suscripción para 1998:Individuales: 1 año (4 números) $62Números sueltos: $18Instituciones: 1 año (4 números) $127Números sueltos: $37Números atrasados GRATIS del JRSdisponibles para las organizaciones quetrabajen en la materia. Póngase en contactocon:Margaret Okole, Assistant Director,Journal of Refugee Studies, RSP, QEH, 21 StGiles, Oxford OX1 3LA, Reino Unido.Fax: + 44 1865 270721Correo electrónico: [email protected]

También está disponible el número especial Palestinians in Lebanon (Vol. 10, nº 3, 1997), quecontiene una selección de las ponencias presentadas en la conferencia sobre Palestinos en Líbano

organizada por el Centre for Lebanese Studies y el RSP en septiembre de 1996.

Ahora hay resúmenes del JRS en la página del RSP en:http://www.qeh.ox.ac.uk/rsp/

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MIGRACIONES FORZOSAS revista 15enero - abril 1998, 1

desplazamiento internosección

Colombia es el escenario del con-flicto armado interno de mayorduración en Latinoamérica: por lo

menos un millón de colombianos estádesplazado en el interior de su país,según cifras publicadas por la Iglesiacatólica en 1997. En algunos departa-mentos, incluidos los fronterizos conEcuador, Perú y Venezuela, al menos el20% de la población original se ha des-plazado. Más personas fueron desplaza-das en Colombia en 1996 que enBurundi, Ruanda o Zaire durante elmismo período, pero los desplazadoscolombianos han recibido poca aten-ción, incluso de sus compañeros colom-bianos.

Aproximadamente el 60% de los DIcolombianos son mujeres, muchas deellas viudas y madres solteras conhijos. De éstas, aproximadamente unacuarta parte son las principales genera-doras de ingresos de sus familias. El72% de los DI son menores de 25 años ymás del 40% son campesinos. LaConferencia Episcopal Colombiana esti-ma que más del 72% de los DI del paísno han recibido ninguna asistencia niayuda.

En ausencia de una reforma agraria,Colombia se ha caracterizado desde

hace tiempo por ocupaciones de la tie-rra y conflictos sociales. Ha habido tresfases en el desplazamiento a gran esca-la de los colombianos en este siglo. Enla primera de ellas, entre 1948 y 1965 yterminando en el período conocidocomo La Violencia, 300.000 personasfueron asesinadas y hasta dos millonesmás fueron desarraigadas mientras losdos partidos políticos dominantesluchaban por el poder. Tras La Violencia,los dos partidos establecieron un pactopara intercambiar el poder cada seisaños. A menudo visto como el origen dela actual “crisis de legitimidad” enColombia, este acuerdo dio como resul-tado la exclusión de todos los demásactores políticos y alimentó el surgi-miento del movimiento insurgente. Lasegunda fase ocurrió durante la décadade los 70, como resultado de las medi-das represivas adoptadas por el Estadopara atacar la creciente insurgencia.Este período vio el surgimiento de uni-dades paramilitares, o grupos armadosprivados, que concentraron sus activi-dades militares contra las guerrillas deizquierda y otros grupos que buscabanla reforma socioeconómica. La fase másreciente del desplazamiento coincidecon el crecimiento de los carteles deheroína y cocaína durante la década delos 80 que, al igual que los ganaderos y

Colombia: la búsqueda de la pazen medio del conflicto

por Seán Loughna

Después de tres décadas de con-flicto armado en Colombia, lascomunidades de DI y otros

grupos amenazados por la violenciaestán intentando parar las matanzasen sus comunidades y evitar másdesplazamientos al declararse públi-camente como neutrales en el con-flicto. La primera de estas “comuni-dades de paz” fue San José deApartado, en la región de Uraba, arra-sada por la guerra, en el noroeste delpaís. La mayoría de los aproximada-mente 300 habitantes de esta comu-nidad (que posteriormente aumenta-ron a 800) eran personas que habíanhuido de la violencia de otros lugaresy se mudaron a los hogares abando-nados por las personas que huyeronde San José de Apartado por lamisma razón. En marzo de 1997, lacomunidad decidió colectivamenteno llevar armas y no apoyar o aso-ciarse con ningún grupo armado. Sinembargo, al rechazar públicamente atodos los grupos en conflicto, lagente de San José se ha expuesto a laintimidación procedente de todaspartes y se ha quedado sin la protec-ción de ninguna. La seguridad detales comunidades parece dependerde una presencia internacional per-manente y visible. En los primerostres meses desde su declaración, 37miembros de la comunidad fueronasesinados tras la retirada del apoyode una ONG internacional. VariasONG nacionales e internacionales(incluidas Oxfam y Médicos delMundo) han ofrecido posteriormentesu apoyo a esta iniciativa, aportandoacompañamiento y bienes de emer-gencia, lo que parece proporcionarun cierto grado de protección.

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desplazamiento internosección

los comerciantes de mineral, han forma-do alianzas poderosas con las fuerzasde seguridad, los grupos paramilitaresy/o las guerrillas.

Atrapados en el fuego cruzado del cons-tante conflicto que empeora, los nocombatientes constituyen cada vez másun blanco de ataques. La mayor partedel conflicto se mantiene por poder, enel que todas las partes intentan asegu-rarse el apoyo activo de la poblacióncivil, obligándoles a tomar partido o ahuir. Muchos de esos desplazados hanhuido desde áreas de intensa actividadde la guerrilla y los paramilitares. Perolas regiones desde las que la gente sedesplaza son generalmente ricas enrecursos agrícolas y recursos naturalesde otro tipo. Cuando la gente huye, losterratenientes locales y los inversoresnacionales o multinacionales puedenapropiarse o adquirir por un coste míni-mo la tierra abandonada. En los últimosaños, los incentivos principales de laguerrilla son también menos ideológi-cos que económicos: buscan un controlmayor sobre el territorio y los recursosnaturales, así como la influencia sobrela población. En consecuencia, el des-plazamiento ya no es una consecuenciadel conflicto, sino un objetivo clave enlas tácticas de guerra de todas las par-tes.

Mientras que el desplazamiento ha ten-dido en el pasado a afectar a los indivi-duos y a las familias, más recientemen-te, comunidades enteras de hasta 4.000personas han huido en masa. La mayo-ría tiende a buscar el anonimato de ciu-dades mayores, en las que generalmen-te terminan en alguno de los ya super-poblados barrios de chabolas. Aquí haypocos servicios básicos, si es que loshay, y pocas oportunidades de empleo.A muchos les faltan los documentoslegales en regla, lo que aumenta su vul-nerabilidad. Allá donde se asienten, losDI pueden ser etiquetadas de “guerrille-

ros” o de simpatizantes de las guerrillassimplemente porque han huido dezonas con presencia guerrillera. En con-secuencia, son recelosos a la hora dehablar de su historia y de su lugar deorigen.

No es infrecuente que los DI se despla-cen dos o tres veces sucesivamente.

Además, el desplazamiento intra-urbanoha ido aumentando desde 1995. Enestos casos, principalmente la gentejoven de las vecindades empobrecidasde las grandes ciudades son forzadas atrasladarse a otros distritos por la poli-cía, las fuerzas armadas y los paramili-tares, como parte de una campaña de

“limpiezasocial”.

A pesar dela retórica,las prome-sas delgobiernocolombianode asistir alos DI han

sido completamente inadecuadas.Aunque “bien equipado”, el programagubernamental CONPES (ConsejoNacional de Política Económica y Social)tiene un impacto operativo mínimodebido a los recursos insuficientes, lafalta de experiencia en el trabajo con DIy la no cooperación con otros actores

nacionales e internacionales. Hay unagrande y variada muestra de ONG quedesempeñan un papel crucial en la pro-tección y asistencia a las personas des-plazadas; su eficacia, sin embargo, estálimitada por la mala coordinación, lafragmentación y la represión que sufrena manos de las fuerzas militares y/oparamilitares. La Iglesia es con diferen-cia la institución más importante queasiste a los DI en Colombia y la únicafuente de apoyo en algunas de laszonas en conflicto. Ha puesto en mar-cha algunas inicitativas clave, como losproyectos para el “diálogo pastoral parala paz”, y es habitualmente el canal pre-ferido para la ayuda internacional.

Seán Loughna es InvestigadorAyudante en el Refugee StudiesProgramme, Universidad de Oxford.El enfoque regional de su investiga-ción incluye varios países enAmérica Central y del Sur.

Colombia: áreas de desplazamiento interno

…el desplazamiento ya no es una consecuencia del conflicto, sino un objetivoclave en las tácticas de guerra de todas laspartes.

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El número de refugiados en todo elmundo ha crecido de 8 a 15 millo-nes en la década pasada. En este

contexto, el aumento del número desolicitantes de asilo que llegan aIrlanda, al que se ha dado mucha publi-cidad, de 424 personas en 1995 a 3.883en 1997, es minúsculo. Sin embargo,junto al aumento del número de solici-tantes de asilo que llegan a Irlanda, hayniveles cada vez más altos de racismo yxenofobia.

El Estado irlandés está obligado por elDerecho internacional a no tolerar elracismo. Mucha de la cobertura que seda a los refugiados en los medios decomunicación y algunos de los comen-tarios de los candidatos en las eleccio-nes generales de junio de 1997 durantela campaña contrastanbrutalmente con el espí-ritu de inclusión y de

derechos humanos que yace tras ladesignación de 1997 como Año Europeocontra el Racismo. Titulares como “losrefugiados hacen estallar la crisis de lavivienda”, “Castigo para 2.000 refugia-dos gorrones”, y “refugiados violadoresdesenfrenados”, crean una impresiónerrónea de que los refugiados estántomando el país, y equiparan ser refu-giado con ser un delincuente.

Irlanda: de una isla de exiliados a una mentalidadinsular

Más de un millón de personas nacidasen Irlanda viven en el extranjero, lamayor parte de ellas en el Reino Unido,EE.UU., Australia y Canadá. Otras dece-

nas de miles viven en Europa, África yAsia. Se estima que unos siete

millones de personas han aban-donado este país desde el

siglo XVII, y que unos 70millones de personas entodo el mundo se identifi-can con Irlanda [1]. En ladécada de los ochenta, una

generación de irlandeses vie-ron los visados Morrison y

Donnolly, que permitían quecuotas de irlandeses trabajaran

en EE.UU., como un pasaportehacia las oportunidades y el bie-

nestar económicos en EE.UU. Sinembargo, antes de la II Guerra

Mundial, Irlanda cerró sus puertasa los judíos. La riqueza que losemigrantes judíos trajeron aIrlanda posteriormente durantelos cuarenta y los cincuenta sehizo rápidamente evidente. Entrelos países de origen de los solici-tantes de asilo que actualmentellegan a Irlanda se encuentran

Rumanía, Argelia, Somalia y laRepública Democrática del Congo (anti-guo Zaire).

En el número de la revista Voices ofRefugees de principios de este año,Khalid Ibraham, coordinador de laAsociación de Refugiados y Solicitantesde Asilo de Irlanda (ARASI), escribió que“los irlandeses han sido respetados entodo el mundo por dos motivos funda-mentales. En primer lugar, no tienenhistoria colonial. En segundo lugar, hansufrido el ser una nación oprimida...Han emigrado hacia todo el mundo... Lacultura irlandesa es muy rica y ha deja-do su influencia en la cultura demuchos países” [2]. Tales alabanzas con-trastan brutalmente con el actual recibi-miento que se dispensa a los solicitan-tes de asilo a nivel estatal y entre cier-tos grupos sociales.

El Libro Blanco sobre políticaexterior y la Ley sobreRefugiados de 1996

En marzo de 1996, el entonces Gobiernoirlandés publicó su primer Libro Blancosobre política exterior. Afirma que lapolítica de desarrollo de Irlanda se “cen-trará especialmente” en “responder a laexistencia de un número creciente derefugiados y desplazados” [9.18]. En uninforme de evaluación del Libro Blanco[3], Andy Storey afirma que está muypreocupado por la situación de los refu-giados a nivel internacional, pero quetiene poco que decir sobre la situaciónde los refugiados que vienen a Irlanda.Señala una sorprendente omisión: elcapítulo del Libro Blanco que trata delos derechos humanos (capítulo 8) nohace referencia a los refugiados, a pesardel extendido empeoramiento de losderechos de los refugiados y solicitan-tes de asilo en todo el mundo. Al no tra-tar esta cuestión desde una perspectivade derechos humanos, Irlanda se arries-ga a dañar su credibilidad en otrosforos internacionales sobre derechoshumanos. El debate del Libro Blancosobre la necesidad de procedimientosmás abiertos y transparentes en la UEsobre asilo y migración [3.207] se veensombrecido por el énfasis que poneen cuestiones como las drogas, la inmi-

Los derechos humanos no tienenfronteras

por Maura Lean

Un reto fundamental al que se enfrentanlos irlandeses consiste en construir unaIrlanda en la que los valores de lamulticulturalidad y la inclusión seanreconocidos y practicados.

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Zlata Filipovic,escritora, fue sacada deSarajevo en avióny ahora vive enDublín

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MIGRACIONES FORZOSAS revista18 enero - abril 1998, 1

gración, la extradición y el crimen orga-nizado. Al incluir la cuestión del asiloen este contexto, se lo asocia claramen-te con la delincuencia y no con los dere-chos humanos.

La Ley sobre refugiados irlandesa de1996 establece procedimientos para tra-tar las solicitudes de asilo y recoge losderechos de los refugiados. Aunquealgunos aspectos de la legislación hansido criticados, su impacto, si se aplica,es considerado por el Consejo Irlandéspara los Refugiados y por otros comomuy positivo. Incluye el derecho deresidencia, a la atención sanitaria y a laseguridad social, así como al acceso alos tribunales. Afirma que los solicitan-tes de asilo deben ser informados a sullegada sobre su dere-cho a consultar con unabogado. Si una perso-na no obtiene el estatu-to de refugiado, puedesin embargo recibir laautorización para per-manecer en el país pormotivos humanitarios,si huyen de las ham-brunas o de los desas-tres, aunque sus dere-chos y los beneficiosque pueden recibir nose especifican.

Sin embargo, a 1 deseptiembre de 1997, sólo cinco seccio-nes de la Ley habían sido puestas enaplicación, y sólo dos de ellas habíanproducido cambios significativos en elprocedimiento. Un pilar central de laLey también cedió. Una decisión adopta-da por un ex-ministro de Justicia,Patrick Cooney, evitó el nombramientode un Comisionado para los Refugiados,el órgano de decisión independienteconcebido para hacer recomendacionesal ministro. (Desde entonces se hahecho evidente que el gran numero decasos todavía no resueltos -actualmentemás de 4.000- requieren el nombra-miento de varios Comisionados para losRefugiados[4]).

Uno de los mayores defectos de la Leyestá en que no reconoce a los refugia-dos el derecho a trabajar, lo que afectaa su capacidad para ser autosuficientesy contribuir a la sociedad irlandesamientras dura el procedimiento relativoa su solicitud, lo que actualmentepuede durar entre dos y tres años. Otrodefecto más de la Ley es su falta de dis-posiciones adecuadas sobre servicios deintérpretes. Afirma solamente que exis-tirán intérpretes, en la medida de loposible, durante el proceso de determi-nación de la condición de refugiado (versección 8, subsección 2; sección 11,subsección 2; y sección 16, subsección11d). En este contexto, debería darse laoportunidad a los refugiados para queutilicen sus habilidades para ayudar a

los demás. La creación de ARASI aumen-ta esta posibilidad, poniendo al serviciode los refugiados y solicitantes de asiloun órgano que está directamente impli-cado en el activismo y en la facilitaciónde la existencia de lazos con las organi-zaciones comunitarias locales.

La situación jurídica de lossolicitantes de asilo y losrefugiados

La Convención sobre los Refugiados de1951 afirma que éstos no deben ser cas-tigados por su entrada ilegal. En 1993,un comité inter-departamental sobrenacionales no irlandeses recomendóque los acuerdos administrativos exis-tentes deberían obtener rango de ley

con el importante añadido de una auto-ridad de apelación adecuada. Sin embar-go, las recientes maniobras en el campode la inmigración ilegal resultan preocu-pantes con respecto a la suerte de losrefugiados que solicitan asilo enIrlanda.

El último día de la legislatura anterior(25 de junio de 1997), el entoncesministro de Justicia puso en marchanuevos procedimientos relativos a loslugares de entrada entre la República deIrlanda y el Reino Unido que de hechoterminaron con el derecho a viajar libre-mente entre ambos países. El ACNURexpresó pronto su preocupación conrespecto al hecho de que estos nuevosprocedimientos relativos a los lugaresde entrada no están en consonancia conlas obligaciones internacionales de losEstados, y pidió su suspensión. La pues-ta en marcha de procedimientos de noadmisión tales como los recogidos en laOrden Ministerial de junio de 1997, sinprocedimientos de revisión ni garantías,pueden tener como resultado la erosióndel derecho internacional fundamental abuscar asilo, y puede violar el principiode non-refoulement existente ahoratanto en derecho interno como interna-cional.

Desde que entró en vigor el Conveniode Dublín el día 1 de septiembre de1997, todo solicitante de asilo tienederecho a recurrir si su solicitud en el

lugar de entrada es denegada basándoseen que tuvo la oportunidad de solicitarasilo en otro Estado europeo firmantedel Convenio. El Convenio de Dublínestablece también el procedimientopara determinar si un solicitante puedeser enviado a otro Estado europeo. Sinembargo, resulta irónico que el únicoprocedimiento legislativo integral queexiste en el derecho irlandés sea eldedicado a facilitar la salida forzosa delos solicitantes en lugar de uno quesirva de pauta para la identificaciónpositiva de las necesidades de protec-ción.

Debe existir la posibilidad de recurrir aabogados de oficio tanto en el lugar deentrada como a lo largo de todo el pro-

cedimiento de examen. Lajusticia gratuita es funda-mental para los solicitan-tes de asilo, para paliarsu falta de conocimientodel sistema legal irlandésy evitar la conculcaciónde sus derechos comosolicitantes de asilo, asícomo las dificultadesinherentes a desenvolver-se en un idioma extranje-ro. La finalización, debi-do a la falta de recursos,del Proyecto Legal paralos Refugiados delConsejo Irlandés para los

Refugiados, que proporcionaba servi-cios básicos de asesoría jurídica demanera transitoria, significa que laúnica ayuda estatal a la justicia gratuitaes de 120 libras irlandesas para costeslegales. El coste real que supone repre-sentar a un refugiado es mucho mayor,ya que requiere formación en derechode refugiados y ejercicio práctico, con-tratar un intérprete e investigar sobre elpaís de origen. Además, esta limitadaayuda estatal sólo está disponible en lafase de apelación, cuando ya se ha pre-sentado y denegado una solicitud. Lafalta de recursos disponibles en estaárea sólo puede indicar un nivel muybajo en las prioridades concedidas a ladistribución de recursos en la defensade los derechos fundamentales.

El 10 de diciembre de 1997, en una cartadirigida al ACNUR, el Departamento deJusticia estableció un proyecto de nue-vos procedimientos para gestionar lassolicitudes de asilo. Existe, sin embargo,una preocupación porque dichos proce-dimientos puedan hacer que la puestaen marcha de la Ley esté todavía máslejana. Una preocupación particular serefiere al hecho de que, durante el pro-ceso de entrevistas, el solicitante deasilo pueda estar acompañado por unrepresentante que, sin embargo, nopueda responder a preguntas en nombredel solicitante o intervenir de ningunamanera. Debe darse al representante laoportunidad, al final de la entrevista, de

…el único procedimiento legislativo integralque existe en Derecho irlandés sea el dedica-do a facilitar la salida forzosa de los solicitan-tes en lugar de uno que sirva de pauta para

la identificación positiva de las necesidades deprotección.

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MIGRACIONES FORZOSAS revista 19enero - abril 1998, 1

hacer notar brevemente las cuestionesque considere necesarias. Hay algunasdudas sobre la legalidad de tal postura.

Acceso a los beneficios sociales

Se ha dicho mucho sobre los costesimpuestos al Estado irlandés por la lle-gada de un número creciente de solici-tantes de asilo, que se estiman en unacifra anual de 12 millones de librasirlandesas [5]. Es más, la visión de soli-citantes de asilo en las colas de la segu-ridad social, y los titulares alarmistasen la prensa lamentándose de su coste,han contribuido a la proyección de unaimagen negativa de los refugiados y lossolicitantes de asilo. Es necesario seña-lar los siguientes hechos:

◆ No se permite a los solicitantes deasilo acceder al empleo, a pesar de quemuchos de ellos están muy capacitadosy cualificados, pudiendo contribuirvaliosamente a nuestra sociedad.Tampoco tienen derecho a subsidios dedesempleo o a beneficios contributivos.

Sin embargo, un solicitante de asilopuede reclamar el mismo SubsidioSocial Suplementario (SSS) que un ciuda-dano irlandés -y en noviembre de 1997,unos 2.400 solicitantes recibían el SSS-,el cual, como se reconoce oficialmente,deja a sus receptores por debajo delumbral de la pobreza.

◆ Se ha acusado a los solicitantes deasilo de utilizar viviendas municipalesen detrimento de familias irlandesasnecesitadas inscritas en las listas deespera, cuando en realidad ni siquierapueden solicitar el acceso a dichas

viviendas. Debido a la escasez de aloja-mientos disponibles, así como al recelode muchos propietarios de aceptarinquilinos extranjeros o inquilinos quesolicitan el Subsidio para Alquiler, losinmigrantes continúan sin hogares, enalojamientos de emergencia durantesemanas o meses enteros.

Una agenda para la actuación y la comprensión

◆ Irlanda es el único país de la UE quetodavía no ha ratificado la Convenciónpara la Eliminación de Todas las Formasde Discriminación Racial. Su ratifica-ción, así como la de la Convención con-tra la Tortura y otros Tratos Crueles,Inhumanos o Degradantes de 1984,debe ser una prioridad principal adelan-tándose al período de sesiones del añopróximo de la Comisión de DerechosHumanos de Naciones Unidas.

◆ La Ley sobre Refugiados de 1996supone un paso hacia delante funda-mental y tiene el potencial para poner aIrlanda en la vanguardia del Derecho y

la práctica internacionales progresistassobre asilo. Sin embargo, a pesar dehaber sido aprobada con el apoyo detodos los partidos hace 18 meses, sóloha sido puesta en aplicación parcial-mente. El Gobierno debería actuar paraaplicar la Ley sin más retraso y, alhacerlo, desarrollar un programa cohe-rente para la recepción de refugiadosconsultando con los órganos oficiales ylas ONG.

◆ Debe reducirse el tiempo de tramita-ción de las solicitudes de asilo, espe-cialmente porque los solicitantes de

asilo no pueden solicitar empleo duran-te ese tiempo. Un incentivo para acele-rar el proceso de solicitud, y así ahorrardinero público, sería la introducción deuna cláusula que, en el caso de que elprocedimiento dure más de seis meses,permita a los solicitantes de asilo bus-car empleo mientras se toma una deci-sión sobre su caso.

◆ El Gobierno debería establecer unórgano apropiado para asesorar y reco-mendar sobre una amplia gama demedidas necesarias para recibir y absor-ber a aquellos refugiados cuyas solicitu-des sean aceptadas. Tal acción requerirála actuación de un amplio número desectores, incluyendo los económicos,jurídicos, culturales, políticos y educati-vos. La experiencia de otros paísesdebería estudiarse cuidadosamente.

◆ Es muy preocupante que el racismo seesté manifestando cada vez más enforma de asaltos físicos y amenazas,escritas y orales, contra los solicitantesde asilo. El Gobierno, y de hecho todoslos políticos, deberían manifestarse

públicamente para eliminar el actualclima de creciente tensión racista.

◆ Esta tensión supone un reto especialpara la campaña en favor de una educa-ción adecuada para la promoción y pro-tección de los derechos humanos. Éstadebería incluir las escuelas, el llamadosector informal, los medios de comuni-cación y el público en general. Esto esespecialmente oportuno porque la ex-Presidenta irlandesa, Mary Robinson, ensu calidad de Alta Comisionada para losDerechos Humanos, ha asumido recien-temente una responsabilidad especial

El Dr. Luo Jin Shang es un médicovietnamita de origen chino, con

cerca de 40 años de experiencia enmedicina occidental y china. “Me

gusta la gente de Irlanda. Son muyamables, como los vietnamitas. Miproblema es que no puedo trabajar

como médico aquí… si no hagonada con mis conocimientos médicos,

mi vida perderá su significado…”

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MIGRACIONES FORZOSAS revista20 enero - abril 1998, 1

El Gobierno ugandés está en procesode modificar su legislación internasobre refugiados. En octubre de 1997,un grupo de 36 miembros del mundoacadémico, refugiados y profesionalesse reunió en el Instituto Maskerere deInvestigación Social para discutir elproyecto de “Ley sobre Refugiados”.Las preocupaciones que se manifesta-ron incluyen las cuestiones siguientes:

1El proyecto fracasa en la proteccióndel derecho fundamental a la libre

circulación recogido en el artículo 26de la Convención sobre los Refugiadosde 1951; por el contrario, permite alMinistro competente determinar ciertaszonas de Uganda en las que los refu-giados no puedan residir sin exigirlesque fundamenten su decisión.

2El borrador confina a los refugiadosen los asentamientos sin permitirles

la libertad para elegir su integraciónlocal, a pesar de las normas de laConstitución ugandesa; y no mencionala necesidad de facilitar la naturaliza-ción de los refugiados como una “solu-ción duradera” (artículo 34 de laConvención de 1951). La estructura dela administración para los refugiados,como se recoge en el proyecto, impedi-rá también la integración, ya que dejala administración de los refugiados enmanos de un ministerio del gobiernocentral en lugar de en el sistema ugan-dés de consejos locales o de canalizarla financiación externa a través de losdepartamentos ministeriales relevan-tes, de modo que tanto los ugandesescomo los refugiados se beneficien delsuministro de servicios.

3El proyecto no incluye el derecho aun juicio justo (artículos 28 y 44 de

la Declaración de derechos ugandesa;artículo 7 [1] de la Carta Africana deDerechos Humanos), ni tampoco inclu-ye el acceso a los tribunales (artículo50 de la Constitución ugandesa; artícu-lo 16 de la Convención de 1951). Lamención a derechos como la libertadde religión, los derechos relativos alestatuto jurídico, incluida la libertadpara adquirir propiedad mueble einmueble, así como ciertos derechossociales relativos a la educación, lavivienda y la asistencia públicas, esolvidada.

El grupo estaba preocupado por elpapel que desempeñaría la sociedadcivil en la promoción de los derechosde los refugiados y ha enviado unacarta al Ministerio de la GobernaciónLocal proponiendo que el debate seabra y la consulta se amplíe paraincluir a miembros de la comunidadacadémica, las ONG que trabajan conrefugiados, las organizaciones de dere-chos humanos, y los representantes dela misma comunidad refugiada.

El grupo, presidido por NathanTwinomugisha, director del Legal AidProject, continúa reuniéndose demanera regular para tratar los variosaspectos de la ley sobre refugiados.Para más información: Barbara Harrell-Bond, RSP, QEH, 21 St Giles, OxfordOX1 3LA, Reino Unido. Fax: +44 1865270721. Correo electrónico:[email protected]

en nombre de Naciones Unidas en elcampo de la educación en los dere-chos humanos.

Como uno de los países más ricos delmundo, el Gobierno irlandés tiene laobligación moral de ayudar a tratarlos problemas del conflicto y la faltade desarrollo que dan lugar a la exis-tencia de refugiados.

En Irlanda, como en muchos otrospaíses, la fiebre del milenio estáempezando a surgir. Como sociedad,debemos preguntarnos qué tipo deIrlanda deseamos para el nuevo mile-nio. Un reto fundamental consiste enconstruir una Irlanda en la que losvalores de la multiculturalidad y lainclusión sean reconocidos y practica-dos. Los refugiados y los solicitantesde asilo pueden, si se les da la opor-tunidad, realizar una gran contribu-ción a nuestra sociedad, con sus cua-lificaciones, experiencia y energía, ala vez que enriquecen nuestra diversi-dad cultural. La reciente historiaeuropea ha puesto de manifiesto quecualquiera puede convertirse en refu-giado. Nos corresponde a todosgarantizar los niveles más altos deprotección a todos los que ya lo son.

Maura Leen es Política Analista deTrócaire.

Trócaire y la Comisión Irlandesa de Justicia yPaz presentaron recientemente un documen-to conjunto sobre políticas titulado Refugeesand Asylum Seekers - A Challenge toSolidarity, que contiene 11 recomendacionesclave que cubren cuestiones tales como elderecho al trabajo, la puesta en práctica de laLey sobre Refugiados de 1996, la educaciónsobre derechos humanos y la asistencia jurí-dica. El documento está disponible (al costede 2 libras irlandesas, más gastos de envío)en: Trócaire, 169 Booterstown Avenue,Blackrock, Co Dublin. Tel: + 353-1-2885385;Fax: + 353-1-2993577/2836022; Correo elec-trónico: [email protected]; Página de internet:http://www.trocaire.org

Notas[1] Tomado del editorial del The Irish Timesdel 29 de septiembre de 1997.[2] Cartas Voice of Refugees, nº 4, septiembre1997, p. 1.[3] Storey, A. “An assessment of the IrishGovernment’s White Paper on Foreign Policy:Sectional Interests versus Professed Ideals”,Trócaire North-South Issues Paper, nº 20,julio de 1996.[4] Respuestas escritas Dail del 11 de diciem-bre de 1997, nº 316, Ministro para laIgualdad ante la Justicia y la ReformaLegislativa (Sr. O’Donoghue) al Diputado Dail(Sr. Ivor Callely).[5] Entrevista con el Sr. Dermot Ahern,Ministro para Asuntos Sociales, Comunitariosy de Familia, Sunday Business Post, 18 deenero de 1998, p. 24.

Uganda: el proyectode Ley sobreRefugiados de 1996

Familia somalí fuerade su casa en Dublín

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MIGRACIONES FORZOSAS revista 21enero - abril 1998, 1

Los esfuerzos de la comunidad inter-nacional se centran cada vez másen las medidas de ayuda al proceso

de retorno. Los esfuerzos son urgentes,ya que el constante desplazamiento agran escala es una pesada carga sobreun país que lucha por recuperarse deun conflicto especialmente violento ydestructivo. La urgencia no significa,sin embargo, que deba ponerse menosénfasis en el retorno a los lugares deorigen. Es más probable que se logren lareconciliación y la normalización a tra-vés de la integración de las comunida-des divididas que por medio de la divi-sión étnica y la separación.

Desplazamiento a gran escala.

La población de Bosnia-Herzegovinaanterior al conflicto era cercana a los4,3 millones de personas. El conflictodesplazó a casi 2,5 millones, de las cua-les aproximadamente la mitad buscaronrefugio. En el punto más álgido del des-plazamiento, Bosnia-Herzegovina teníauna población de unos 2 millones depersonas que habían permanecido ensus hogares, a la vez que más de unmillón eran desplazados internos. Eldesplazamiento, por lo tanto, afectó auna gran parte de la población, y lamayoría, si no todas, las regiones aco-gen actualmente a DI en hogares colecti-vos o privados abandonados.

Muchos municipios incluyen cifras sig-nificativas de DI, que en algunos casosllegan a ser más de la mitad de la pobla-ción actual, lo que tiene consecuenciaspolíticas, sociales y económicas.

El proceso de retorno

A pesar del objetivo explícito de lacomunidad internacional con respectoal retorno de refugiados y DI, los retor-nos reales han caído por debajo de lasexpectativas. En 1996, el ACNUR habíaprevisto el retorno de 870.000 perso-nas: 500.000 DI y 370.000 refugiados.En realidad, a finales de 1996, sólo88.000 habían vuelto del extranjero y164.000 de otras zonas de Bosnia-Herzegovina, por lo que el total en 1996ascendió a 252.000.

Incluso las previsiones más modestaspara 1997 se han revelado demasiadooptimistas. En lugar de los 200.000retornos del extranjero previstos, las

estimaciones actuales para 1997 seencuentran entre 100.000 y 120.000retornos para finales de año. Además, larepatriación desde el extranjero superaa los retornos de DI, que llega a 90.000personas. Muchos de los refugiados quevienen del extranjero son incapaces devolver a sus lugares de origen, y se con-vierten así en DI. Los retornos que hantenido lugar hasta ahora son principal-mente los llamados “retornos de mayo-rías” [1], bien a zonas de antiguos fren-tes que ahora son seguras, o a áreasque pasaron de una entidad a otra enlos Acuerdos de Paz de Dayton. Estasáreas incluyen los alrededores deSarajevo, la zona que rodea el antiguoenclave de Gorazde, y “el Yunque”, alsur de Banja Luka, que fue entregado ala República Srpska. Los movimientosde retorno desde el extranjero se hanconcentrado principalmente en laszonas urbanas (Sarajevo) y en la partemás occidental de Bosnia, alrededor dela ciudad de Bihac.

La inestabilidad socioeconómica

El conflicto en Bosnia-Herzegovinasiguió una lógica de separación étnica,entre los serbios ortodoxos, los católi-cos croatas y los “bosnios” musulmanes.

Bosnia-Herzegovina: problemas yprogresos del proceso de retorno

por Carl Hallergård

Más de la mitad de la población deBosnia-Herzegovina fue obligada adesplazarse por el conflicto que devastó elpaís entre 1992 y 1995. Sólo el 15% havuelto hasta ahora a sus lugares deorigen.

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MIGRACIONES FORZOSAS revista22 enero - abril 1998, 1

Las diferencias étnicas en la sociedadanterior al conflicto no respondían, sinembargo, a diferencias sociales, cultura-les y económicas entre la población.Aunque no es extraño que en las socie-dades multiculturales ciertas profesio-nes sean ejercidas por personas de un

cierto origen étnico, en general éste noera el caso en Bosnia-Herzegovina.Aunque los municipios rurales eran fre-cuentemente homoétnicos, los pueblosvecinos estaban generalmente domina-dos por diferentes grupos étnicos.

El desplazamiento de más de la mitadde la población y el intento de reorgani-zar el país en virtud de parámetros étni-cos ha conducido, por lo tanto, a lainestabilidad social y económica.Grandes poblaciones urbanas seencuentran actualmente desplazadas azonas rurales, tales como muchos ser-bios que dejaron Sarajevo y se mudarona Visegrado, Zvornik y Bijelina, enBosnia oriental. Al mismo tiempo, lapoblación rural musulmana de Bosniaoriental se encuentra actualmente des-plazada en Sarajevo y en sus alrededo-

res, y viven en casas y apartamentos dela población serbia que los abandonó.Los distintos hábitos, forma de vestir ycomportamiento de las poblacionesurbana y rural que actualmente vivencodo con codo, es una fuente constantede hostilidad. Los movimientos simultá-neos de población en ambas direccioneshan conducido a una mezcla socialmen-te explosiva de población urbana y ruraltanto en el campo como en la ciudad.

Económicamente, ambos grupos depoblación están fuera de su “hábitateconómico” natural, y sus cualificacio-nes no están utilizadas adecuadamente.Este desequilibrio entre cualificacionesy situación es probablemente una de lasprincipales razones de que la recupera-ción económica sea lenta.

Además, los desplazados constituyenun objetivo fácil para la manipulaciónpolítica y la propaganda. Están frustra-dos por la hostilidad de la población deorigen y sufren la discriminación de losempresarios locales, por lo cual el des-plazamiento es sentido cada vez máscomo una profunda injusticia. Por lotanto, la hostilidad hacia el otro bandoes fácilmente manipulada por los políti-cos nacionalistas, que presentan laseparación étnica y la independenciacomo la solución natural.Paradójicamente, el desplazamientointerno es también uno de los principa-les impedimentos para el proceso deretorno. Dado que la mayor parte deldesplazamiento es de origen étnico, no

puede lograrse un progreso significati-vo en el proceso de retorno sin el retor-no de las minorías, es decir, de los ser-bios bosnios a la Federación Croata-Musulmana, de los croatas bosnios y losmusulmanes a la República Srpska, y delos croatas y musulmanes dentro de laFederación.

La resistencia hacia tales retornos mino-ritarios se encuentra principalmenteentre los desplazados, que no sólotemen tener que dejar su alojamientoactual cuando los propietarios origina-rios vuelvan, sino que también se opo-nen al derecho a volver de otros gruposétnicos cuando tal derecho no se extien-de a ellos. Gran parte de la violencia yde la inestabilidad que han acompañadoa los intentos de favorecer el retorno delas minorías hasta el momento, se debea la acción de los desplazados. En algu-nas ocasiones, el acuerdo político sobreel retorno de las minorías ha sido inver-tido tras las violentas protestas localespor parte de los DI.

El continuo desplazamiento a gran esca-la es, por lo tanto, la causa remota demuchas de las dificultades sociales, eco-nómicas y políticas que impiden larecuperación de Bosnia-Herzegovina.Además, la naturaleza de los problemasdescritos anteriormente es tal, que, sinun progreso significativo de los retor-nos de las minorías, es probable queaumente el riesgo de inestabilidad polí-tica y social.

…no puede lograrse unprogreso significativo enel proceso de retorno sinel retorno de las minorías

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El condicionamiento positivo

El primer paso importante para apoyarel proceso de retorno adoptado por lacomunidad internacional se llevó a caboen Sintra en junio de 1997, en la reu-nión ministerial del Consejo para laPuesta en Práctica de la Paz. Se decidiócondicionar los esfuerzos de ayudainternacional a nivel local a la acepta-ción de los retornos, en particular el delas minorías.

Este “condicionamiento positivo” se estáponiendo en marcha de modo creciente.En la práctica implica que la rehabilita-ción de las casas, las escuelas, los servi-cios sanitarios, y los suministros deagua y electricidad, así como los pro-gramas de generación de renta y derefuerzo de la capacidad local, se condi-

cionen a la aceptación, por parte delmunicipio, del retorno de las minorías.

En parte como consecuencia de estapolítica, cada vez más municipios estáncambiando su actitud hacia el retornode las minorías, incluso cuando lasjerarquías políticas superiores (cantona-les o gubernamentales en el plano delas entidades) todavía se oponen oficial-mente a tales retornos. Los retornos delas minorías se ven ahora como unaforma de mejorar las condiciones devida de la población mayoritaria, que deotro modo se quedaría sin dicha asis-tencia. El número de retornos de lasminorías es todavía limitado, pero laimportancia política de esta nueva víano debería ser subestimada. Un par deejemplos ilustran tanto el cambio comolas dificultades que todavía persisten.

Dos ejemplos

Antes hemos hecho referencia al despla-zamiento de los serbios desde Sarajevoa Bosnia oriental, y de los musulmanesdesde Bosnia a Sarajevo. Vogosca es unode los suburbios de Sarajevo que fuetransferido a la Federación Croata-Musulmana en los Acuerdos de Dayton.La población serbia dejó Vogosca justoantes del traspaso, y en gran parte setrasladó a Visegrado, en Bosnia oriental.Muchas de las familias musulmanas

desplazadas volvieron a Vogosca tras eltraspaso y todavía quedan casas vacíasque pueden ser reparadas para permitirel retorno de los serbios. El alcaldemusulmán de Vogosca está a favor delretorno de los serbios, ya que hayrumores de que la producción en lagran fábrica de coches de Vogosca estáa punto de empezar otra vez, y que losprincipales ingenieros y empleados eranserbios.

Sin embargo, el municipio tambiénalberga a muchas mujeres y niños deSrebrenica, y los primeros intentos delas denominadas “visitas para mirar yver”, con autobuses desde Visegrado yVogosca han fracasado, debido a las vio-lentas protestas de las mujeres deSrebrenica [2]. Sin embargo, las visitasindividuales han tenido éxito, y la repa-

ración de las casas y elretorno de las primerasfamilias serbias está encurso en el marco de unproyecto puesto en mar-cha por la ONG francesa“Equilibre”, financiadopor ECHO. Aunque lasfamilias retornadas sesienten amenazadas porlas mujeres deSrebrenica, sus vecinosmusulmanes les handado la bienvenida y leshan prometido darles la

protección necesaria. Prefieren a susoriginarios vecinos serbios antes que alas mujeres de Srebrenica.

Un segundo ejemplo se refiere a Stolac,al sur de Mostar. A principios de 1996,el ACNUR, con el apoyo de ECHO, inicióuno de los primeros proyectos pilotopara el retorno de las minorías en elinterior de la Federación. En Stolac, laspoblaciones serbia y musulmana fueronperseguidas durante el conflicto por elejército croata de Bosnia y sus casas fue-ron destrozadas u ocupadas por croatasdesplazados del centro de Bosnia. Elproyecto piloto incluyó la reparación decien casas destrozadas para permitir elretorno de las familias musulmanasdesplazadas a la zona este de Mostar.

A lo largo de 1996, las autoridades loca-les y los DI se opusieron violentamenteal retorno, e incluso se saboteó la lim-pieza de escombros en las casas destro-zadas. La presión política en las altasesferas no parecía tener ningún efecto.

En la primavera de 1997 cambió la acti-tud. Paró la destrucción, y las casasseleccionadas pudieron limpiarse yrepararse por un grupo de trabajo croa-ta-musulmán de Mostar. Las cien fami-lias están volviendo ahora a sus hogaresen Stolac, al igual que otras familias queestán fuera del proyecto. Además, el

retorno de los serbios a Stolac tambiénha empezado.

Aunque es difícil relacionar el cambio deactitud con una causa concreta, la posi-bilidad de que los desplazados croataspudieran retornar a sus hogares enBosnia central, fue probablemente signi-ficativa. De hecho, en Kakanj, un muni-cipio actualmente dominado por losmusulmanes al noroeste de Sarajevo, unpequeño proyecto llevado a cabo por elComité de Bérgamo y financiado porECHO, prevé el retorno de los croatasdesplazados, no sólo desde Stolac, sinotambién desde Capljina y Drvar. Laposibilidad del retorno ha despertadotanto interés en Drvar (una ciudad enHerzegovina occidental, con un 90% depoblación serbia antes del conflicto yactualmente una población enteramentecroata) que hay grandes esperanzas deque los serbios de Drvar que actualmen-te se encuentran desplazados en el áreade Banja Luka podrán también volver acasa.

Tiempo para el cambio

Esto son sólo dos ejemplos de lo que escasi un cambio de actitud en todo elpaís. Se está realizando principalmentea nivel municipal, y no siempre respon-de a cambios políticos similares en esfe-ras más altas. Incluso en la RepúblicaSrpska, que oficialmente continúa opo-niéndose al retorno de las minorías,parece que empiezan a abrirse posibili-dades en el área de Banja Luka.

La amenaza para la estabilidad y la paz,viene, no de un integración de los tresgrupos étnicos, sino del desplazamientointerno a gran escala. Las solucionesrápidas al retraso en el proceso deretorno, como el reasentamiento de losrefugiados retornados o el asentamientopermanente de DI en zonas mayorita-rias, sólo conducirán al bloqueo de todoel proceso de retorno. Las tensionesentre la población de origen y los DIreasentados seguirán siendo grandes yel deseo de volver de la poblaciónminoritaria de origen se reducirá drásti-camente.

Por lo tanto, es crucial que la recienteapertura sea aprovechada rápidamentepor la comunidad internacional, ya quees una promesa para un cambio políticoreal y la normalización en Bosnia-Herzegovina. Debería resistirse la tenta-ción de elegir soluciones alternativas,independientemente de lo atractivasque puedan resultar a corto plazo.

Carl Hallegård es funcionario paraBosnia-Herzegovina en la OficinaHumanitaria de la ComunidadEuropea (ECHO) de Bruselas.

La amenaza para la estabilidad yla paz, viene, no de un integraciónde los tres grupos étnicos, sino deldesplazamiento interno a granescala.

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MIGRACIONES FORZOSAS revista24 enero - abril 1998, 1

Sexta Conferencia IRAP,Gaza, 13-16 diciembre 1998

La sexta Conferencia IRAP, organizadapor la Asociación Internacional para elEstudio de la Migración Forzosa(AIEMF), se celebrará los días 13 a 16de diciembre en la ciudad de Gaza. Elpatrocinador local es el Programa deSalud Mental de la Comunidad deGaza. Las personas que deseen organi-zar talleres sobre una cuestión parti-cular y/o aquellos que deseen presen-tar ponencias deberían enviar un resu-men a: Karin Geuijlen, Tolsteegsingel52, 3582 AM Utrecht, Países Bajos.Correo electrónico:[email protected] Se espera podercontar con fondos para algunos de losque presenten ponencias. Para másinformación, contactar con: WolfgangBosswick, Managing Director,European Forum for MigrationStudies, University of Bamberg,Katharinenstr 1, D-96052.BambergAlemania Tel: + 49 951 37041. Fax: + 49 951 32888. Correo electróni-co: [email protected]

La AIEMF tiene ahora status jurídico yadmite nuevos miembros. Más deta-lles en: www.uni-bamberg.de/~ba6ef3/iasfm.htm

En la primera etapa de la guerra deBosnia-Herzegovina (BH), se llevó acabo un debate difícil entre los

gobiernos europeos, el ACNUR, el CICRy otras organizaciones, sobre la suertede los desplazados por la guerra.Finalmente, las naciones europeas acor-daron recelosas proporcionar refugio,pero advirtieron que los refugiadosdeberían volver a Bosnia tan prontocomo terminara la guerra [1].

Durante 1996, la comunidad internacio-nal puso en marcha numerosos progra-mas de alojamiento en un intento defacilitar el retorno tanto de los refugia-dos como de las poblaciones desplaza-das internas. En los 22 municipiosidentificados por el ACNUR como áreasde retorno prioritario, se repararonunas 23.800 unidades de alojamiento.Sin embargo, tras este esfuerzo enco-miable, había todavía 66.000 unidadesque reparar sólo en estas 22 zonasseleccionadas. Costó unos 270 millonesde dólares lograr este resultado mien-tras que el coste de rehabilitar lascasas hasta su nivel anterior a la guerraalcanzaría una cifra de entre los 3.000y los 4.000 millones de dólares. Alnivel del compromiso actual de todoslos países que contribuyen, sólo unquinto de loshogares dañadosestaría rehabilita-do al final delplan de trienal(1996-1998) adop-tado por la comu-nidad donante[2]. Sin embargo,en este contextode escasez deviviendas, varios países europeos handecidido alentar el retorno de sus refu-giados bosnios. Un retorno rápido ymasivo de refugiados en el futuro pró-ximo crearía condiciones sociales ypolíticas que probablemente debilitaríanel proceso de paz.

El retorno de los refugiados planificadopara los años venideros será difícil pordistintos motivos:

La primera razón obvia es logística. El

retorno planeado intentará, en un perío-do de tiempo relativamente corto,invertir el éxodo de población que sellevó a cabo a lo largo de los cuatroaños de guerra. La gestión de un movi-miento de población a tal escala -queincluye el suministro de apoyo y la pla-nificación de escuelas, servicios sanita-rios, trabajos, derechos de propiedad,documentos de identificación, etc.-sería desalentador para cualquier socie-dad y supondrá un reto especial parauna que surge de una guerra devasta-dora de cuatro años.

Una segunda razón es psicológica. Alser repatriados, los refugiados dejaránsus entornos de asilo relativamentecómodos para volver a un país destro-zado por la guerra, con una sociedadcivil y una economía frágiles. Aunquese ha realizado un enorme progreso, elEstado de BH no está todavía capacita-do para proporcionar todos los servi-cios que sus ciudadanos esperan, comola educación, la salud y los serviciospúblicos.

El tercer problema procede de la cifradesproporcionada de desplazadosinternos y refugiados comparada con elnúmero de hogares hábiles material y

políticamente. Del millón de bosniosdesplazados internos que huyeron desus hogares destrozados o tomadospor la fuerza, algunos ocuparon loshogares abandonados por otras fami-lias igualmente desplazadas y por elmás de un millón de refugiados, otrosse mudaron con familiares y amigos,mientras que el resto encontró acomo-do en edificios públicos transformadosen centros para los DI. Para decenas demiles de familias “minoritarias” [3], elretorno no es una opción, ni ahora ni

La gestión del retorno deEste artículo está basado en la experien-cia de la Oficina Humanitaria de laComunidad Europea (ECHO) en Bosnia-Herzegovina, que apoya el proceso deretorno y en particular el retorno de laspoblaciones minoritarias. Las opinionesexpresadas son las del autor y no refle-jan necesariamente las opiniones y polí-ticas de la Oficina.

Fuente: ACNUR, “Information notes -Bosnia and Herzegovina, No 12/96-2/97 December 1996/February 1997”, p.2, publicado por la Oficina del EnviadoEspecial del ACNUR a la antiguaYugoslavia.

Notas[1] En los casos de “retornos de mayorías”, losretornados pertenecen al mismo grupo étnicoque la mayoría de la población actual en la zonaa la que vuelven. Los “retornos de minorías”, porel contrario, son aquellos en los que los retorna-dos serán una minoría, como grupo étnico, den-tro de la población actual de la zona a la quevuelven.[2] Se estima que unas 7.000 personas, princi-palmente hombres y jóvenes, están todavíadesaparecidos tras las masacres del ejércitoserbo-bosnio en Bosnia oriental.

Subvencionar el retorno de las familiasrefugiadas aumenta las desigualdadessociales y es arriesgado social y políti-camente.

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MIGRACIONES FORZOSAS revista 25enero - abril 1998, 1

desplazamiento internosección

los refugiados a Bosnia-Herzegovina

por Richard Jacquot

en un futuro próximo, independiente-mente del hecho de que sus casas seanhabitables. Casi la mitad de la poblacióntotal de BH no puede volver a casa por-que sus hogares están ocupados, daña-dos, destrozados o no son accesiblespor motivos políticos.

La cuarta razón de la complejidad delretorno de los refugiados se refiere alproceso que debe seguirse para el retor-no de las poblaciones desplazadas demanera ordenada en el complejo entor-no de BH. Para invertir el movimientode población causado por la guerra, elesfuerzo relativo al alojamiento necesi-taría centrarse en la rehabilitación delas casas vacías y dañadas de las fami-lias desplazadas. En la medida en quelas familias vuelven a sus hogares reha-bilitados, dejan libres espacios habita-bles. Estos espacios serían ocupadospor sus habitantes originales o por lasfamilias que no pueden volver a suscasas por motivos políticos. Este esfuer-

zo tendrá que enfrentarse con la propie-dad y los derechos de las minorías, lalibertad de circulación y de expresión, yotras cuestiones complejas.

El quinto problema es facilitar los retor-nos a la vez que se tienen en cuenta lasdiferencias en las experiencias de laguerra y en el nivel de asistencia pro-porcionado a las poblaciones refugia-das, desplazadas internas y las que sequedaron. Los que permanecieron o seconvirtieron en desplazados internoshan experimentado cuatro años de atro-cidades y privaciones causadas por unaguerra brutal que tuvo como blancoespecialmente a los civiles. En muchoscasos, han perdido a miembros clave desus familias y se han quedado sin losrecursos económicos necesarios parareconstruir sus familias y sus vidas.Estas personas experimentarán resenti-miento ante el hecho de que las familiasrefugiadas, que al menos parcialmenteevitaron las experiencias de la guerra,

pueda convertirlas a muchas de ellas denuevo en personas sin hogar. Tambiénexperimentarán resentimiento por elhecho de que, mientras muchas familiasrefugiadas volverán del extranjero connuevas capacitaciones, ahorros y sub-venciones del país de acogida, ellos nohabrán recibido ninguna asistencia, omuy poca. Es bastante evidente que unapolítica de retorno que ignore las expe-riencias de los desplazados internos yde las poblaciones que no se marcharoncrearía o exacerbaría las hostilidadesentre los beneficiarios, lo cual, a su veztendría consecuencias directas sobre lafutura estabilidad social y política.

Con estos problemas en mente, es posi-ble señalar una metodología ampliapara el retorno de las familias refugia-das. Dado que el espacio de viviendasde las familias refugiadas está ocupadopor familias desplazadas internas, elesfuerzo del retorno debería concen-trarse en ayudar a aquellas familias des-

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plazadas internas a rehabilitar sushogares. Una vez que se muden a suscasas ya rehabilitadas, dejarán vacanteel espacio de vivienda para las familiasrefugiadas que hayan vuelto. Esto resul-taría más fácil de lograr que intentarhacer cuadrar el número de familiasrefugiadas que actualmente viven enpaíses de asilo con los espacios devivienda que necesitan ser rehabilita-dos.

Además de trasladar el centro de larehabilitación desde las familias refu-giadas a las desplazadas internas, lospaíses europeos deberían ligar los retor-nos de refugiados a los logros de losprogramas de alojamiento. Si el primerpaso del proceso de retorno consiste entrasladar a las familias desplazadasinternas hacia sus hogares de origen,los países europeos deberían prever elretorno de las familias desplazadas parahacerlo coincidir con el retorno de lasfamilias desplazadas internas. Lo idealsería que se produjera hacia el final delverano o principios del otoño en Bosnia,para poder utilizar la primavera y elprincipio del verano para reparar yconstruir las casas. Además, el períodode construcción debería ser utilizadopor quienes llevan a cabo los progra-mas, el gobierno y los municipios, paraorganizar y gestionar los flujos depoblación.

La distribución de las subvenciones alas familias refugiadas debería inte-rrumpirse o reducirse seriamente.Subvencionar el retorno de las familiasrefugiadas aumenta las desigualdadessociales y es arriesgado social y políti-camente. Supone también un uso impro-ductivo de los recursos económicos.Rehabilitar un hogar abandonado odañado cuesta una media estimada de15.000 marcos [4]. Las subvenciones delos países de acogida a las familias refu-giadas retornadas alcanzan los 15.000marcos por familia. Como resultado, lacomunidad donante ha gastado 30.000marcos en crear un espacio habitable yenviar a una familia desplazada internay a una familia retornada a sus nuevoshogares, o a los de origen. Si, en lugarde conceder una subvención, el paíseuropeo en cuestión destinara la mismacantidad para la reconstrucción de unhogar, entonces, por esos 30.000 mar-cos, se habrían creado dos espacioshabitables y hasta dos familias despla-zadas internas y dos familias refugiadasvolverían a sus nuevos hogares, o a losde origen. Desde luego, cada una deestas soluciones ofrece varias combina-ciones posibles, pero la segunda solu-ción, que no incluye ninguna subven-ción, es más justa y más eficaz.

Esta metodología no trata las numero-

sas cuestiones relativas a la propiedad ya los derechos de las minorías, la liber-tad de circulación y de expresión, elnivel de destrucción, y otros problemas,todos los cuales tendrán consecuenciadirecta en el proceso de retorno. Losprogramas de reconstrucción en entor-nos difíciles como BH deberían empezarcon objetivos limitados e incorporar laslecciones aprendidas en programas deseguimiento a medida que se hacencada vez más complejas y caras. En BH,la destrucción física, la inestabilidadpolítica, el colapso económico y la ten-sión social contribuyen a la complejidaddel programa de reconstrucción. Elretorno de una familia serbia a unazona controlada por los musulmanes, ode una familia musulmana a una zonabajo control croata, es más complejoque construir o reparar una casa. El pro-grama empezaría con “retornos demayorías” y pasaría a incluir cada vezmás “retornos de minorías”, aprendien-do lecciones valiosas en ese proceso.Además de aumentar su complejidad,los programas de seguimiento se haráncada vez más caros, porque los prime-ros hogares en ser reparados son losmenos dañados. A medida que avanzala reconstrucción, las casas reparadasen el segundo año estarán más grave-mente dañadas que las del primer año;finalmente, sólo quedarán por rehabili-tar los hogares totalmente destrozados,y ésa será la parte más cara del progra-ma.

Sin embargo, esta metodología reflejaimportantes realidades que debentenerse en cuenta para asegurar el éxitoa largo plazo del proceso de retorno. Enúltimo lugar, la cooperación y la coordi-nación entre las agencias gubernamen-tales, los beneficiarios, los donantes yquienes ejecutan los programas son cru-ciales para asegurar el éxito del retornode los refugiados. Tal perspectiva hademostrado su efectividad y eficacia enel programa de alojamiento deUSAID/OFDA de 1996. Debería mante-nerse y perfeccionarse en el futuro.

Richard Jacquot ha estado gestionan-do operaciones de ayuda de emer-gencia desde 1984 para elInternational Rescue Committee yotras ONG de EE.UU., la más recientede las cuales es la de Bosnia-Herzegovina. Es también profesor deRelaciones Internacionales en laUniversidad Estatal de San Franciscoy ha escrito un artículo comparandoproyectos de alojamiento enKurdistán, Azerbayán y BH.Dirección: Richard Jacquot, 3450Sacramento St, Box 107, SF, CA94118, EE.UU. Correo electrónico:[email protected]

Notas[1] “Finding place to live top priority forBosnians”, Alan Freeman, Globe & Mail (Canadá),mayo 1997.[2] “The priority reconstruction program: fromemergency to sustainability”, Reconstruction sec-tor report, vol. 3, noviembre 1996, p. 1,Comisión Europea, EBRD y CED.[3] Minoría y mayoría son términos relativos. Unmusulmán en Zenica es parte de la mayoría ylos miembros de los otros dos grupos -serbios ycroatas- son minorías. Pero un musulmán o uncroata en Banja Luka es un miembro de la mino-ría, ya que Banja Luka se convirtió en una ciu-dad controlada por los serbios como resultadode la guerra.[4] Según un proyecto de alojamiento de 1996de USAID/OFDA (Office of Foreign DisasterAssistance) que rehabilitó más de 2.500 casas.Esta cifra es utilizada actualmente por otrosdonantes, como el ACNUR, para planificar pro-yectos de alojamiento.

RRNRelief and Rehabilitation Network(Red de Asistencia y Rehabilitación)

La RRN pretende mejorar las políticas y lapráctica de la acción humanitaria, ofre-ciendo una fuente de información, un foropara el intercambio de la experienciaanalizada y una fuente para el desarrolloprofesional. La RRN llega actualmente amás de 600 miembros en más de 80 paí-ses y se está extendiendo. La RRN producetres tipos de publicaciones: un boletín tresveces al año, entre cuatro y seis NetworkPapers, y una o dos Good PracticeReviews al año. Están disponibles eninglés y francés, y se agradecen las contri-buciones en estas lenguas. La cuota anualde asociación es de 25£, pero existe tam-bién un número limitado para suscripcio-nes gratuitas.

Varias de las publicaciones de la RRN sondirectamente relevantes para los que tra-bajan sobre migración forzosa. Las GoodPractice Reviews han tenido por objeto elagua y los saneamientos en las emergen-cias; programas de emergencia sobre ali-mentación suplementaria; la distribucióngeneral de alimentos en las emergencias;aprovisionamiento de semillas durante ydespués de las emergencias; el recuento yla identificación de las poblaciones benefi-ciarias de las operaciones de emergencia(incluyendo el registro); y la planificacióndel asentamiento humano temporal paralas poblaciones desplazadas en las emer-gencias.

Para más información sobre las publica-ciones y la suscripción: RRN, OverseasDevelopment Institute, Portland House,Stag Place, Londres SW1E 5DP, ReinoUnido. Fax: + 44 171 393 1699. Correoelectrónico: [email protected]. Página web:http://www.oneworld.org./odi/rrn

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La reciente legislación, especialmen-te las leyes comúnmente llamadasley Pasqua (1993) y ley Debré

(1997), ha sido ampliamente criticada apesar de no haber sido más rigurosaque la normativa relativa a la inmigra-ción en el resto de Europa. Por otraparte, las autoridades francesas no hansido coherentes en su tratamiento delasilo. La mayor crítica se ha centrado enla falta de reconocimiento de los solici-tantes de asilo que huyen de la persecu-ción de fuentes no estatales (por ejem-plo [1]) -incluidos los refugiados argeli-nos y de la antigua Yugoslavia- así comola falta de claridad en el sistema deasilo, que Brachet [2] describe como unapolítica de decisiones consciente, lla-mándola “asilo clandestino” (asile aunoir).

El “verano de las regulariza-ciones”

El proyecto de ley Chevènement, ennombre del Ministro de Interior Jean-Pierre Chevènement, forma parte deuna segunda fase legislativa introducidapor el gobierno de Lionel Jospin tras suvictoria en las elecciones de 1997. Unafase preliminar fue la publicación deuna serie de criterios [3] en junio de1997 que determinan si un extranjeroque vive ilegalmente en Francia es sus-ceptible de recibir un permiso de resi-dencia temporal (carte de séjour de 5 ó10 años). La publicación de estos crite-rios tuvo como consecuencia un perío-do de intensa actividad entre los resi-

dentes clandestinos de Marsella, que seha hecho conocido como el “verano delas regularizaciones”. La fecha límitepara las solicitudes era el 1 de noviem-bre de 1997, y todos los que lo solicita-ron han sido citados para una entrevis-ta.

Las pautas, sin embargo, no mencionanel asilo. Se refieren a los inmigrantesque han estado viviendo en Francia ile-galmente durante varios años y reúnenciertas condiciones que indican un cier-to nivel de integración. Estas personas,a las que en ocasionesse denomina “sanspapiers”, se dividen endos grupos. Uno estáformado por aquellosque no solicitaronasilo porque no espe-ran obtenerlo aunquehabían huido de supaís principalmentepor razones políticas.Los rigurosos obstácu-los de las leyes Pasquay Debré a menudo hantenido el efecto dealentar a los inmigran-tes a entrar y permane-cer en Francia ilegal-mente en lugar de solicitar asilo. Elsegundo grupo está formado por losque han pasado por el procedimiento deasilo y, a pesar de haber recibido unarespuesta negativa, no han sido expul-sados del territorio francés. Esto sedebe amenudo a que las autoridades de

extranjería han perdido el contacto conellos, pero en muchos casos supone laaceptación tácita de que no pueden serdevueltos forzosamente a su país deorigen por razones humanitarias. Uninforme reciente de la AsambleaNacional afirmó que había hasta200.000 solicitantes de asilo rechazadosviviendo en Francia (citado en [2]), aun-que muchos creen que es una exagera-ción.

El caso de Akhmad ilustra la situaciónde aquellos que han preferido no solici-tar asilo. Es argelino, de origen tuareg.Desde 1991 sólo entre el uno y el cua-tro por ciento de los argelinos que hansolicitado asilo lo han recibido [4]. Lostuareg son musulmanes, pero a menudoson el objetivo de grupos islámicosdebido a su interpretación de la ley islá-mica. El propio Akhmad se sentía espe-cialmente vulnerable, ya que tambiénhabía sido oficial del ejército argelino,visto como el enemigo por los gruposislámicos. No había sido víctima de nin-guna persecución directa, pero cierta-mente tenía una razón legítima de preo-cupación. Llegó a Francia clandestina-mente hace cuatro años. El año pasado

supo que toda su fami-lia había muerto enuna redada nocturnaen su pueblo. A pesarde ello, era muy cons-ciente de que teníamuy pocas oportunida-des de recibir asilo yprefirió continuar en laclandestinidad. Lalegislación francesaanterior sobre asilo noreconocía la persecu-ción por “agentes nogubernamentales”,como los grupos islá-micos de Argelia, comobase para la concesión

del estatuto de refugiado. Hay un tipode “asilo territorial” temporal para losargelinos, pero los criterios que lo rigenno son públicos, son arbitrarios y pare-cen aplicarse sólo a los argelinos queentraron regularmente en Francia.Desde enero de 1994, 2.500 argelinos

Visión desde las almenas: el trabajo comunitario en lafrontera de la fortaleza europea

por Michael CollyerEs una peculiaridad francesa que eldebate sobre la inmigración esté tanpolitizado. Suponiendo que se apruebe aprincipios de 1998, el Proyecto de Leyfrancés sobre la entrada y permanencia deextranjeros será el vigesimoquinto cambiode la legislación original de 1945.

Desde 1991 sóloentre el uno y el

cuatro por ciento delos argelinos que

han solicitado asilolo han recibido

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MIGRACIONES FORZOSAS revista28 enero - abril 1998, 1

han recibido esta forma de asilo [4] quepermite muy pocas posibilidades de tra-bajo. Akhmad ha decidido solicitar laresidencia temporal en aplicación de laspautas de 1997.

Farika solicitó asilo en 1993 cuandollegó de Bosnia. No se reconoció que losrefugiados de Yugoslavia estabanhuyendo de la persecución gubernamen-tal, de modo que muy pocos reunían losrequisitos de la condición de refugiado.En contraposición a los argelinos,muchos recibieron protección temporal.Farika recibió un permiso de tresmeses, que no fue renovado. Cuandoexpiró, permaneció en Francia. Ella esmusulmana y procede de Banja Luka, loque actualmente es la zona serbia de laRepública Srpska, y todavía no deseavolver. Ella, y muchos otros como ella,siguen sans papiers en Francia. TambiénFarika ha solicitado la residencia tempo-ral en virtud de las pautas de 1997.

Asile au noir

Las autoridades conocen bien la existen-cia de estos sans papiers. Farika paga sufactura eléctrica y recibe visitas de lapolicía regularmente en el apartamentoque ocupa. Akhmad está inscrito pararecibir asistencia médica gratuita en elhospital. De vez en cuando les solicita-rán su documentación en la calle,durante controles policiales, y amboshan pasado alguna noche en comisaría.Este tipo de actitud podría ser conside-

rada como una especie de toleranciahumanitaria benévola. AmnistíaInternacional hizo recientemente unapetición para que ningún argelino fueradevuelto a Argelia [5]. Del mismo modo,el ACNUR ha afirmado que la devolu-ción de bosnios no debería forzarsehasta que pueda asegurarse su seguri-dad (en [4]). A pesar de ello, el Estadono ha establecido ninguna norma sobreellos. Viven mendigando y trabajandoclandestinamente. No tienen ningunaseguridad y todo contacto con la policíales recuerda que sicontinúan en liber-tad es sólo porqueuna u otra persona“está de buenhumor” y que lapróxima vez quizáno tengan tantasuerte.

Olivier Brachet relaciona esta situacióncon “un verdadero régimen de asiloclandestino (asile au noir) en Francia, ... elefecto previsto y conocido de una polí-tica que es evidentemente aplicada demanera no sistemática” ([2] p. 20). Lasmanifestaciones de esta política vandesde las medidas de protección tempo-ral, como el asilo territorial en el casode los argelinos, hasta la tolerancia dela residencia ilegal. Es “una política diri-gida a desalentar la migración que...tiene por objetivo hacer la situaciónmuy difícil para aquellos de los que seespera que no puedan resistir la lucha y

se marchen, o desaparezcan, pero nosin comunicar a otros candidatos poten-ciales su opinión de las dificultadesencontradas” ([2] p. 22). Las normas querigen esta política no están publicadas yson confidenciales. Un grupo de normasclaramente formuladas podría tenercomo resultado alentar a los solicitantesde asilo, mientras que esta estrategiadiscrecional casuística asegura que lassolicitudes de asilo continúen descen-diendo.

Veo muchas pruebas del asile au noir enmi trabajo en la comunidad. Franciareconoce razones humanitarias válidaspara no devolver forzosamente a uncierto número de inmigrantes ilegales,pero al mismo tiempo no desea hacerseresponsable de ellos. En los casos deAkhmad y Farika, y de muchos otroscomo ellos, esto implica la tolerancia desu existencia clandestina. Hay dos moti-vos evidentes para ello. El primero,como sugiere Brachet, es un deseo dedesalentar más flujos migratorios. Elnúmero de argelinos que solicitan asiloha disminuido de un máximo de 2.303en 1994 a 643 en 1996 [4], a pesar deldeterioro de la situación en Argelia. Ensegundo lugar, hay una conciencia de lacreciente hostilidad nacional hacia losinmigrantes (el Frente Nacional ganó el15% de los votos en las elecciones de1997) y se piensa que un apoyo claro delos derechos de los solicitantes de asilotendría como resultado una pérdida deapoyo electoral. Es obvio que existe unargumento sólido en el hecho de quemayores restricciones a la inmigraciónalimentan sentimientos racistas al cri-minalizar a los inmigrantes, pero raravez se interpreta de esta manera.

El Proyecto de LeyChevènement, octubrede 1997

Las pautas de junio de 1997 fueron elprimer paso de un nuevo programalegislativo introducido por la adminis-tración de Lionel Jospin. El Proyecto deLey, que se fundamenta en gran medidaen un informe del politólogo PatrickWeil [6], se presentó a la AsambleaNacional el 15 de octubre de 1997. Fueaprobado en una primera lectura endiciembre de 1997 y probablementeserá aprobado sin cambios significati-vos en la segunda (la lectura final) en

La idea de que el asilo en negro es unapolítica consciente y no un descuido

accidental está ganando terreno.

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Vecindario de ParcBellevue enMarsella

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MIGRACIONES FORZOSAS revista 29enero - abril 1998, 1

febrero de 1998. Existen varias omisio-nes decepcionantes en esta ley. Porejemplo, era generalmente esperadoque la ley Pasqua y la ley Debré seríanderogadas, pero no se ha previsto nin-guna norma al respecto. Sin embargo,actualmente se prevén dos cambiosimportantes en el sistema de asilo.

En primer lugar, se ha establecido clara-mente la diferencia entre el derecho alasilo y la política general de inmigra-ción. La legislación previa era criticadapor considerar el asilo como un elemen-to de la política de inmigración, enlugar de una cuestión distinta de dere-chos humanos. En segundo lugar, elasilo territorial, que incluye la residen-cia durante un año con el derecho a tra-

bajar, se concederá a varios cientos depersonas que no pueden ser considera-dos refugiados según la Convención deGinebra. No sólo tiene el Estado menosobligaciones hacia los refugiados deesta categoría, sino que ha conservado“el derecho soberano para poder conce-der asilo territorial según sus propioscriterios y su propia voluntad” ([6], p.55). En esta fase, los criterios de la apli-cación no están más claros; la discre-ción, la flexibilidad y el humor de unfuncionario concreto en un día determi-nado continuarán siendo factoresimportantes a la hora de conceder estetipo de asilo.

Así, continuará en pie el asile au noir.Un grupo de organizaciones de refugia-dos prestigiosas continúa pidiendofronteras totalmente abiertas [7], aun-que ésta es imposible en la práctica.Incluso propuestas más modestas, comola sugerencia del Consejo Europeo sobreRefugiados y Exiliados de una defini-ción más amplia de refugiado [8], inclui-ría a la mayor parte de la población deArgelia (de 27 millones de habitantes).Parece, por el momento, que Franciaestá atascada en un sistema que aceptade mala gana la tolerancia.

Las implicaciones del trabajocomunitario

Hay aproximadamente cien personas siningresos oficiales que viven en el vecin-dario de Marsella en el que trabajo.Muchos de ellos son familias con niñospequeños. Materialmente, su nivel devida es alarmante. Los apartamentos,

que frecuentemente han sido ocupadosno tienen agua corriente y la únicafuente de electricidad es a menudo unsolo cable conectado precariamente a laluz de la escalera. Su existencia esextremadamente insegura; si no encuen-tran trabajo en el mercado, o no hantenido un buen día mendigando, nocomen. Por otra parte, muchos de losniños van a una de las escuelas localesy se puede acceder a los servicios sani-tarios a través de las organizaciones nogubernamentales locales. Sin embargo,el vecindario es muy pobre y los servi-cios locales están sobreutilizados en elmejor de los casos. Estos refugiados seven forzados a depender de la buenavoluntad de pequeñas organizacioneslocales. Las asociaciones de inmigrantes

de Marsella son extremada-mente competentes, pero nodan abasto de trabajo. Heconocido a muchos refugia-dos implicados en procedi-mientos administrativos queellos apenas entienden.Aunque pueden ponerse encontacto con ayuda másexperimentada, una aproxi-mación ad hoc está lejos de

ser ideal y muchas dificultades poten-ciales, tales como la mala salud y losproblemas de transporte, pueden impe-dirles buscar ayuda cualificada.

La idea de que el asile au noir es unapolítica consciente y no un descuidoaccidental está ganando terreno. Existeuna creciente frustración en el vecinda-rio en el que trabajo, porque las peque-ñas asociaciones locales cuyos emplea-dos tienen bajas cualificaciones y expe-riencia en el trabajo con refugiadosestán debiendo enfrentarse a una situa-ción que exige soluciones nacionales oeuropeas. Los propios refugiados estánsorprendidos porque su misma existen-cia no es reconocida por un país en elque han estado viviendo durante variosaños. Al mismo tiempo, todos, tanto losrefugiados como la comunidad local,tienen miedo de protestar demasiadoalto por si el resultado sea la expulsiónrepentina de las personas implicadas.Todo se lleva a cabo con cautela, lo quequizás nos convierte a todos en conspi-radores en el sistema de asile au noir. Siel asile au noir debe considerarse unasolución al delicado equilibrio entre laacción humanitaria y las relacionespúblicas que todo gobierno se ve obli-gado a emprender, sus costes debenreconocerse de forma más amplia. Laley Chevènement tiene todavía capaci-dad para hacerlo pero, por el momento,la posibilidad más esperanzadora esque las pautas de 1997 se apliquen conindulgencia.

Mike Collyer es trabajador social enATD Quart Monde en Marsella.

Notas[1] ACNUR. Guidelines relating to the Eligibilityof Algerian Asylum Seekers. 1995.[2] Brachet, O. Groupe de recherche informel etscientifique sur l’asile “L’impossible organigram-me de l’asile en France. Le développement del’asile au noir”, Revue Européene des MigrationsInternationales, Vol. 13, 1997, pp. 7-36.[3] Circulaire du 24 juin relative au réexamen dela situation de certaines catégories d’étrangersen situation irréguliere, Diario Oficial, 26 dejunio de 1997, pp. 9818-9821.[4] Amnistía Internacional-Sección francesa yFrance Terre d’Asile. Droit d’asile en France: étatdes lieux, 1997.[5] “M. Jospin n’a pas cédé aux critiques émissesà gauche sur l’immigration”, Le Monde, 16 octu-bre 1997, p. 5.[6] Weil, P. Mission d’étude des législations de lanationalité et de l’immigration, 1997.[7] Farine, P. “Débats autour d’un Rapport”,Migrations Société, Vol. 9, nº 53, septiembre-octubre 1997.[8] ECRE (European Consultation on Refugeesand Exiles). Working paper on the need for asupplementary refugee definition, 1993.

Universidad An Najah,Franja Oeste: Estudio dela migración involuntariaEl Academic Programme for the Study ofInvoluntary Migration (APSIM) fue funda-do en 1994 en la Universidad Nacional deAn Najah, Nablus, Franja Oeste. El pro-grama multidisciplinar investiga y docu-menta la migración involuntaria. En abrilde 1995, en la primera reunión de la redUNESCO/UNITWIN (APSIM) fue nombra-do centro regional responsable de la coor-dinación de los estudios sobre refugiadosentre las instituciones que participaron enPalestina.

El Programa ha abogado por la introduc-ción de dos cursos sobre migración invo-luntaria en el plan de estudios de AnNajah y mantiene una biblioteca de librose informes de investigaciones sobre cues-tiones relativas a los refugiados palestinos,tibetanos y kurdos. APSIM ha organizadotambién varias conferencias nacionalessobre diferentes aspectos del problema delos refugiados palestinos. APSIM publicaahora una revista académica, en árabe einglés, titulada Involuntary Migration, quetrata una amplia gama de cuestiones rela-tivas con los refugiados palestinos. Seagradecen los artículos relevantes en eldebate académico sobre los refugiadospalestinos (máximo de 8.000 palabras).

Para más información: NajehJarrar, Director, APSIM, An Najah

National University, PO Box 7,Nablus, Palestina (vía Israel).

Tel: +972 9 370042. Fax: +972 9 387982.

Correo electrónico:[email protected]

Parece, por el momento, queFrancia está atascada en un siste-ma que acepta de mala gana latolerancia.

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MIGRACIONES FORZOSAS revista30 enero - abril 1998, 1

Las palabras “Ruanda” y “genocidio”están intrínsecamente unidas parasiempre, y significan uno de los

capítulos más horribles de la Historia dela humanidad. En un período de tresmeses entre abril y julio de 1994, seestima que un millón de ruandeses fue-ron masacrados. Colectivamente, lacomunidad internacional se retiró y pre-senció el horror desde fuera. La inactivi-dad internacional tuvo como consecuen-cia que el genocidio no se evitara, no separara una vez empezado, y finalmentese permitiera que los responsables esca-paran.

Esto hubiera tenido que dar lugar a mul-titud de preguntas y a una respuestarápida y enérgica. No hizo ninguna deesas cosas. Las cuestiones relativas a laexistencia de suficientes avisos sobre lacatástrofe inminente llegaron muchomás tarde. Y tampoco hay señales deplanificación o de acción colectiva paraasegurar que los mecanismos necesariosestén disponibles para contrarrestaracontecimientos tan desastrosos en elfuturo. ¿Qué lecciones hemos aprendidode esta tragedia continuada, y quéactuación realista podría haberse lleva-do a cabo?

◆ Intervención tempranaMuchas de las recientes tragedias de losderechos humanos en África Central,incluido el genocidio de Ruanda, podríanhaber sido evitadas. El mundo fue avisa-do con tiempo suficiente. La interven-ción y la actuación en una fase tempra-na habrían salvado cientos de miles devidas. El General Dallaire, comandantede Unamir, ha comentado que con 5.000soldados y un mandato claro, podríahaber evitado la mayoría de las matan-zas. No hay nada nuevo en esta lección.Ha ocurrido una y otra vez en las crisishumanitarias y en las emergencias dederechos humanos en todo el mundo.Sin embargo, los Estados fracasan a lahora de actuar a tiempo y de formadecisiva para evitar las tragedias; en sulugar, esperan hasta que el coste y lasimplicaciones de la intervención sehagan prohibitivos y complejos.

El fracaso a la hora de intervenir prontoen las cuestiones relacionadas con laseguridad de un campo de refugiados esotro ejemplo evidente. Un esfuerzo

La crisis de los refugiados en losGrandes Lagos: ¿Hemos aprendidoalguna lección? por Flora MacDonald

A continuación se presenta una parte del discur-so pronunciado por la Honorable FloraMacDonald, ex Ministra de Asuntos Exterioresde Canadá, en la Decimosegunda ConferenciaAnual sobre Derechos Humanos, organizadapor el Refugee Studies Programme, el día 12 denoviembre de 1997. Los fragmentos selecciona-dos se refieren fundamentalmente a sus reco-mendaciones de cara a la actuación.

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Puente Rusomo,frontera entreRuanda y Tanzania,1996

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MIGRACIONES FORZOSAS revista 31enero - abril 1998, 1

internacional integral y solidario desdeel principio para asegurar que las armasnunca llegaran a los campos, que seexcluyera del estatuto de refugiado alos refugiados armados y a quienes vio-lan los derechos humanos y se les sepa-rara de los demás refugiados, que loscampos estuvieran situados en áreasseguras suficientemente alejadas de lafrontera, y que hubiera una adecuadapresencia civil, formada en derechoshumanos y lista para responder a losproblemas de seguridad, habría contri-buido enormemente a mitigar la enor-midad del genocidio. Nada de eso ocu-rrió. Los Estados no pueden permitirsedudar por más tiempo.

◆ Prohibición absoluta detransporte de armas a lazonaDurante los últimos tres años, AmnistíaInternacional ha publicado informes yha iniciado varias campa-ñas contra el escanda-loso tráfico internacio-nal de armas que haflorecido en ÁfricaCentral. La prolifera-ción de armas ligeras yequipo militar asocia-do a ellas en la regiónfue un factor que con-tribuyó especialmentea la crisis de derechoshumanos en general, yal aumento de los pro-blemas de seguridaden los campos de refu-giados, en particular.Hay un número demedidas concretas quepueden tomarse paraasegurar que transpor-tes de esta naturalezano contribuyan a losabusos de los derechoshumanos y pongan a los refugiados enpeligro. Los gobiernos deben adoptar lalegislación adecuada para penalizarcualquier implicación en el transporteilegal de armas y también deben llevar acabo investigaciones profundas sobrecualquier denuncia de que sus naciona-les o las empresas registradas en suspaíses están implicados en dicho tráfi-co. Los individuos que estén implicadosdeben ser llevados ante la justicia.Deberían enviarse observadores interna-cionales a todos o al menos a los pun-tos de entrada más importantes de laregión.

◆ Presencia internacional protectoraEl ACNUR ha lanzado recientemente unllamamiento para el establecimiento dealgún tipo de policía o fuerza cuasi-militar para ayudar a tratar las crisis dela misma naturaleza que las ocurridasen África Central. Es evidente que una

presencia internacional fuerte de algúntipo, también en los campos de refugia-dos, era muy necesaria para controlar elrespeto a los derechos humanos y pro-teger a todos los no combatientes de laregión. Como poco, los observadores dederechos humanos pueden desempeñarun papel crucial a este respecto. Sinembargo, éstos deberían tener asegura-da la libertad de circulación por toda laregión y deberían recibir autoridad paraintervenir junto con quienes tienen elcontrol del territorio, para intentaractuar cuando los derechos humanosson violados.

Deben tenerse en cuenta seriamente lasrecomendaciones realizadas por variospaíses, incluido el mío (Canadá) paraque haya una capacidad de reacciónrápida en Naciones Unidas. Hay dosargumentos para tal capacidad: en pri-mer lugar, la experiencia en crisis inter-nacionales señala la necesidad, en algu-

nos casos, de responder rápida y enér-gicamente; y en segundo lugar, la inte-gridad operativa de dicha fuerza exigeque no sea reunida en casos puntualesni a toda prisa. Una fuerza permanentepuede ser necesaria para la prevenciónefectiva.

◆ JusticiaLos esfuerzos para poner en práctica orestaurar la seguridad en los campos derefugiados puede estar firmementebasada en un sistema de justicia. En pri-mer lugar, debe haber investigacionesactivas y en curso para asegurar quequienes atentan contra los derechoshumanos y otros delincuentes seanidentificados y apresados. Cualquierotra cosa simplemente refuerza laimpunidad y alienta más violaciones dederechos humanos y otros delitoscomunes.

Cuando se realizan acusaciones bienfundadas de genocidio o de otros críme-

nes contra individuos, éstos deben serentregados a las autoridades, que seencargarán de que sean procesados ade-cuadamente y llevados a juicio con rapi-dez. No es aceptable acusar a los indivi-duos y después simplemente mantener-los detenidos, sin cargos ni juicio, comoestá ocurriendo ahora en las superpo-bladas cárceles de Ruanda.

Los tribunales penales internacionalesestablecidos para investigar los críme-nes en los genocidios de la antiguaYugoslavia y en Ruanda, a la vez quehacen valientes esfuerzos para realizarsus mandatos, tienen una naturaleza adhoc y les faltan mandatos coherentes ylos recursos necesarios para hacer sutrabajo rápidamente. La necesidad deun tribunal internacional permanentepara tratar con quienes violan los dere-chos humanos no ha sido nunca tan evi-dente ni crítica como actualmente. Elgrupo de trabajo establecido por el

Consejo de Seguridad para exami-nar esta cuestión debería dar porterminados su trabajo rápidamen-te, y producir recomendacionesconcretas para acelerar este fin.

◆ Reforma del Consejode SeguridadExiste una necesidad imperativade ampliar y modernizar elConsejo de Seguridad para asegu-rar que la pertenencia a él reflejael mundo actual en lugar del de1945. África no tiene ningúnmiembro permanente en elConsejo de Seguridad y su perte-nencia con cualquier otro statuses infrecuente. En el momento delsurgimiento del conflicto en laantigua Yugoslavia, Europa teníados miembros permanentes en elConsejo y un montón de proble-

mas. No es sorprendente que lareacción a la crisis bosnia fuera casiinmediata; la reacción frente a la crisisen la región africana de los GrandesLagos necesitó meses para salir a la luz.

El Consejo de Seguridad debería consi-derar el establecimiento de un subcomi-té humanitario, encargado de la respon-sabilidad de informar por completo alConsejo del desarrollo y de las preocu-paciones relativas a la dimensión huma-na de las cada vez más numerosasemergencias complejas. Tal foro deberíaestablecer los mecanismos para que seoyeran las voces de las organizacionesno gubernamentales de manera regular.Estas organizaciones, enraizadas en lasactividades de las comunidades locales,podrían ser un medio efectivo para ase-gurar que quienes toman decisionesestén avisados con tiempo suficiente.

Los abusos contra los derechoshumanos son las señales

fundamentales de alerta tempranade una situación turbulenta. Como

ha dicho a menudo la AltaComisionada de Naciones Unidas

para los Refugiados, la Sra.Ogata, “los abusos contra los

derechos humanos de hoy son losrefugiados de mañana”.

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MIGRACIONES FORZOSAS revista32 enero - abril 1998, 1

Un Centro de NacionesUnidas para el Análisis deConflictos

Antes de poder obtener una respuestacoherente a los conflictos, la claridad yla uniformidad en los planteamientosentre los actores internacionales princi-pales resulta esencial. Una propuestapráctica para superar las presiones deltiempo y promover la unidad en losplanteamientos consistiría en establecerun Centro para el Análisis de Conflictos[CAC] en la Secretaría de NacionesUnidas, que podría informar directa-mente al Secretario General. Éste seríaresponsable del análisis de las políticas,no de las operaciones, y su éxito semediría por la amplitud con que su tra-bajo influyera en las decisiones sobrelas políticas adoptadas en todo elmundo. Necesitaría un entregadoAyudante del Secretario General, con

buenos antecedentes como profesoruniversitario y diplomático, a la cabezade un equipo formado por personasprocedentes de diferentes disciplinas,incluyendo la diplomacia, la cienciapolítica, el PNUD, los medios de comu-nicación, el ejército, la empresa y la psi-cología. Tal unidad proporcionaría elmarco intelectual para la respuestaestratégica dentro de un grupo de con-tacto, por parte de Naciones Unidas, laOUA, la OTAN, la OSCE o el ForoRegional de la Asociación de Países delSudeste Asiático (FRA).

La labor de asesoría del Centro seríaindependiente; por lo tanto, lo idealsería que estuviera financiado con apor-taciones voluntarias de los Estados y lasFundaciones, en lugar de a través delpresupuesto normal de NacionesUnidas. De hecho, una vinculacióndirecta (no sólo financiera) con una

organización externa prestigiosa podríaayudar a proteger al CAC del habitualtira y afloja de los asuntos de NacionesUnidas. Las estructuras serían sencillas;el CAC encargaría estudios a expertosreconocidos en cualquier campo queconsiderara relevante. Los puntos devista contradictorios, no infrecuentesen el mundo académico, podrían ser uti-lizados positivamente para establecerlos parámetros en los que tratar los pro-blemas.

El Centro:

◆ localizaría trabajos académicos y res-puestas en las políticas, también en laszonas de conflictos futuros;

◆ promovería la difusión de las leccio-nes aprendidas, seminarios y talleres;

◆ coordinaría un diálogo; y

◆ establecería buenas relaciones de tra-bajo con otras organizaciones y acuer-dos internacionales, incluyendo la OUA,el FRA, la OTAN, el Banco Mundial y laUE.

La experiencia de negociadores hábilessería recogida y sintetizada. Una vezdeterminados su calidad y relación conotros órganos, el CAC superaría o almenos haría disminuir la competitivi-dad entre las organizaciones internacio-nales, que ha sido un rasgo muy acen-tuado de la respuesta internacional alos conflictos.

Aumentar la capacidad pararesponder al conflicto interno

El conflicto interno es complejo. Puedeque las lecciones que podrían aprender-se de Bosnia y Burundi no lo sean, oque no sean utilizadas efectivamentedebido a la ausencia de intercambioscoherentes en el interior de unMinisterio de Exteriores, entre los mili-tares y los civiles, o entre organizacio-nes y gobiernos y analistas externosexpertos. Los escandinavos han desarro-llado un modelo útil de embajadores iti-nerantes para el mantenimiento de lapaz y para África. Esto permite a losindividuos viajar extensamente, apren-der a través de la experiencia directa,mantener contactos personales útilescon la comunidad de las ONG, y tener

La respuesta a las crisis en losGrandes Lagos africanos

por Glynne Evans

Un Adelphi Paper recientemente publicadoexamina las respuestas internacionales alconflicto étnico de Burundi y Ruanda entre1993 y 1997 y su extensión al vecinoZaire. Este resumen proporciona detallesrelativos a cuatro propuestas concretas.

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MIGRACIONES FORZOSAS revista 33enero - abril 1998, 1

conocimiento de las tendencias que seestán desarrollando en cada parte, biensobre el terreno o en el ámbito académi-co. Los envíos especiales de EE.UU.están tradicionalmente dirigidos a unpaís o a una negociación específica, porejemplo en Mozambique. Un envío espe-cial de EE.UU., dirigido a una zona espe-cífica, implica un embrión de políticacomún extranjera y de seguridad, quetodavía tiene que demostrar su operati-vidad y por lo tanto puede tener menorinfluencia que un emisario de uno delos principales actores, como el ReinoUnido, Francia o Alemania.

Quizás no haya sido una coincidenciaque Noruega, que no es miembro de laUE, haya respaldado regularmente nego-ciaciones productivas en dos direccio-nes. El Parlamento noruego destinadirectamente parte de su presupuestode ayuda a su Ministerio de Exteriorespara la gestión de los conflictos y lasactividades relacionadas con el mante-nimiento de la paz. Con un embajadorpolítico con un presupuesto flexible,libre de la necesidad de los requisitosburocráticos relativos a los gastos enpolítica exterior, Noruega puede respon-der suavemente, sin publicidad y conbuenos resultados, como hizo enOriente Medio y en Burundi a través delos discretos fondos de San Egidio. Elmodelo podría continuarse de maneramás extensa. El Reino Unido, por suparte, desde 1993 ha desarrollado unreconocido modelo para la “formaciónpara el mantenimiento de la paz”, demanera conjunta entre el Ministerio deExteriores y el Armed Staff College, enCamberley. Esto está pensado para rom-per las barreras de comunicación entreellos, por ejemplo, los militares y elpersonal diplomático, funcionarios deNU, ONG y los medios de comunicaciónque puedan estar presentes en el terre-no respondiendo a una situación deconflicto. Trabajan juntos en grupo,bajo presión, para desarrollar la mezclade respuestas a un escenario complejo.Aunque las respuestas nacionales difie-ren, los actores internacionales princi-pales deberían estar más dispuestos aaprender de la experiencia del exterior,en lugar de asumir que sus propioscolegas han cubierto el terreno.

Respuestas doctrinales alconflicto interno

En una situación como la de Burundi, eldespliegue de fuerza impresionante yde poder aéreo no trae la paz. Se necesi-ta una gran fuerza humana sobre elterreno para proteger a un grupo deciviles contra el ataque armado deotros, en un entorno étnicamente mixto.No es probable que esto esté al alcancede Occidente. La complejidad de una“intervención humanitaria”, como en eleste de Zaire, puede no ser totalmenteentendida a nivel político. Dado quehabrá más propuestas de este tipo, la

doctrina de tipo militar podría extraerútilmente las implicaciones, en térmi-nos de un despliegue grande y durade-ro, así como las alternativas de tomarpostura por una de las partes al respal-dar a una figura local o de apoyar indi-rectamente la acción local. Otra opciónpuede consistir simplemente en obser-var o ser testigos. Los informes deAmnistía Internacional, incluso los rela-tivos a Burundi, han tenido impacto.Los observadores no armados, como losde la OUA, o los observadores de dere-chos humanos de Naciones Unidas enRuanda, pueden estar en mejorsituación para reprimir el abusogeneralizado que las unidadesestructuradas, y tienden a ser másfiables que algunas de las ONGcon menos experiencia.

Colaborar en la promo-ción de políticas de cons-trucción de la paz

Un plan ingenioso para la cons-trucción de la paz, la reconcilia-ción a través de la reconstrucción y laintegración económica en la región -quepermita el retorno de los restantes refu-giados-, podría ser la clave de la estabi-lidad en los Grandes Lagos africanos. Nilas NU ni la UE pudieron enfrentarsesolas a las políticas relativas a los con-flictos internos superpuestos. La fuerzade las NU, con el apoyo de la OUA,podría residir en recoger el respaldointernacional para un acuerdo de pazglobal y en formar un equipo fuerte deobservación de derechos humanos parala región en su totalidad. La familia deNU (incluyendo el PNUD, la ComisiónEconómica para África [ECA] y el AltoComisionado de Naciones Unidas paralos Derechos Humanos) debería trabajarjunto con el Banco Mundial para propor-cionar el marco analítico para un planregional que cubra el desarrollo econó-mico, un sistema de justicia autóctonoy efectivo que termine con la cultura dela impunidad, y el retorno de los refu-giados. Tal aproximación basada en eltrabajo de grupo debería ser una prácti-ca estandarizada y debería entrar enjuego cuando el nuevo Centro para elAnálisis de Conflictos identifique lapotencialidad de un conflicto social vio-lento. Frente a los objetivos teleológicosde la UE y su continuo énfasis en laayuda de emergencia durante el período1994-97, la verdadera fuerza europeaen términos de ayuda al desarrollo,asistencia técnica y preferencias comer-ciales, también podría apoyar dichoplan. Mientras se pone en marcha elplan, los donantes podrían desplegaruna modesta “financiación de reacciónrápida” para las necesidades inmedia-tas, para ayudar a los gobiernos débilesa crear una fuerza judicial y policialefectiva, estructuras financieras y tribu-tarias y para empezar a reconstruir ladestrozada economía.

Conclusión

Entre 1994 y 1997, los principales acto-res en la zona de los Grandes Lagosafricanos parecieron perder la confianzaen el compromiso de Occidente paraayudar a encontrar soluciones a susproblemas. La culpabilidad con respectoal genocidio en Ruanda provocó un des-bordamiento enorme de la asistenciahumanitaria en lugar de creatividadpolítica para tratar los problemas de loscampos de refugiados y de la inestabili-dad. La atención occidental era intermi-tente y demasiado a menudo provocadapor el interés de los medios de comuni-

cación, desapareciendo cuando las imá-genes estaban ausentes de las pantallasde televisión. En su lugar, un grupo dedirigentes poderosos de la zona demos-tró su clara determinación de empezar aestablecer por sí mismos un orden deldía. Museveni, Kagame, Kabila (e inclusoMeles) tenían lazos antiguos y todoshabían llegado al poder por la vía mili-tar. Éstas fueron soluciones “caseras” dedirigentes firmes. Las pautas occidenta-les tradicionales pueden no ser adecua-das en este contexto. En su lugar, lademocracia no partidista y un fuerteelemento de cooperación regional, polí-tica y quizás económica puede ser elmodelo de futuro.

Glynne Evans es la embajadora bri-tánica en Chile. Escribió Respondingto Crisis in the African Great Lakescuando se encontraba en año sabáti-co en el International Institute forStrategic Studies en 1996-97. Lasopiniones expresadas en el artículoson las de la autora y no deben serentendidas como expresión de lapolítica del Gobierno británico.

Extraído del Adelphi Paper 311,International Institute for StrategicStudies. 1997. ISBN 0-19-829403-4.14.99£. Publicado por la OxfordUniversity Press, Gt Clarendon St,Oxford OX2 6DP, Reino Unido. Resumidocon permiso de la OUP. Puede ser repro-ducido para uso personal. Para cual-quier otro uso, por favor, obtenga elpermiso de la OUP o una licencia paracopias limitadas de la CopyrightLicensing Agency, 90 Tottenham CourtRoad, London W1P 9HE, Reino Unido.

“Las NU, como una empresade éxito, debe adaptar periódi-camente su línea de productosal cambio de la demanda”Ex-Subsecretario General de NU para el Mantenimiento de laPaz, Kofi Annan, 1996.

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MIGRACIONES FORZOSAS revista34 enero - abril 1998, 1

Rights have no borders: worldwideinternal displacementGlobal IDP Survey/Norwegian Refugee Council. 1998. 123 pp.

ISBN 82-7411-064-1.

En noviembre de 1997,el Consejo Noruego

para los Refugiados aco-gió una conferenciainternacional en Osloque examinó las cuestio-nes relativas a los des-plazados internos detodo el mundo. La confe-rencia intentó identificarlas especificidades delos problemas de los DI.La introducción al librorecoge algunas de lasactividades instituciona-les que se llevarán a

cabo en los próximos años para reforzar la proteccióny el activismo en favor de los DI, así como un resu-men del plan de acción adoptado por la conferencia.

Contacto: Global IDP Survey/NRC, Chemin Moïse-Duboule 59, CH-1209 Geneva, Suiza. Tel: +41 22788 8085. Fax: +41 22 788 8086. Correo electróni-co: [email protected]

Population issues and the situation ofwomen in post-coflict Guatemalapor Seán Loughna y Gema Vicente. 1997. 58 pp. ISBN 92-2-110620-9.La situación de las mujeres y las perspectivas de géne-ro constituyen un reto fundamental en un contextoafectado por la guerra y requiere consideracionesserias en cualquier marco de acción. Este estudiosobre Guatemala muestra la complejidad de las cues-tiones y fue preparado para el Programa de Acción dela Organización Internacional del Trabajo sobreFormación en Capacitación y ActividadesEmprendedoras para los Países que salen de unConflicto Armado. Contacto: ILO Publications, CH-1211Geneva 22, Suiza.

Refugee health: and approach to emergency situationspor Médicos Sin Fronteras. 1997. 380 pp. ISBN 0-333-72210-8.5,85£.

Este libro está dirigido alos profesionales impli-cados en asistencia sani-taria pública a refugia-dos y desplazados. Tratauna amplia gama decuestiones sanitariasespecíficamente relati-vas a los refugiados ytrata las prioridades dela intervención durantelas distintas fases deuna crisis de refugiados,de la emergencia a larepatriación. Contacto:MSF, 124-132Clerkenwell Road,

London EC1R 5DL, Reino Unido. Tel: +44 171 7135600. Fax: +44 171 713 5004.

REFUGIADOS. Los Derechos Humanosno tienen fronterasEd. Amnistía Internacional. Coedición española, Los libros dela Catarata. 1997. 111 págs. ISBN: 84-8319-008-7.Publicado originalmente en inglés en junio de 1997con el título Refugees. Human rights have no bor-ders. Este informe es parte de la campaña empren-dida por Amnistía Internacional a fin de recordar alos gobiernos del mundo su deber de evitar las vio-laciones de derechos humanos para que la gente notenga que abandonar su país, y para garantizar quea los que huyen de la persecución se les permitealcanzar un lugar seguro, se les otorga verdaderaprotección contra la devolución forzosa y se lesgarantizan unos niveles mínimos de trato humanita-rio mientras se encuentren desplazados. Contacto: Los Libros de la Catarata, Fuencarral 70,28040 Madrid. Tel.: +34-91-3152851. Fax: +34-91-5324334.

SÁHARA. El proceso de autodetermi-nación (Dossier) Anexo: Informe del SecretarioGeneral de la ONU, 1997.Editado por la Asociación Amig@s de la RASD de Euskadi.

1997. 52 págs.El dossier hasido editado ypublicado con elobjetivo derecopilar ydifundir lainformación ydocumentaciónreferente a losacontecimientosque están suce-diendo en elSáhara en elproceso de auto-determinación yante las pers-pectivas delreferéndum queva a celebrarseen 1998.Además de dar

unas breves referencias históricas del proceso deautodeterminación, de la cultura y vida del pueblosaharaui y sobre los campamentos en Tindouf(Argelia), se detallan diferentes informes y resolu-ciones de las Naciones Unidas en los últimos años,y otros informes de expertos sobre la situación y enfavor de la autodeterminación. Además se anexacomo documento el informe del Secretario Generalde la ONU S-882 de 13 de noviembre de 1997.Contacto: Asociación Amig@ de la RASD de Euskadi.Galerías Itaka, General Álava 7, sótano 10, 01005Vitoria-Gasteiz. Tel.: +34-945 147853. Fax: +34-945147357. Correo electrónico: [email protected]

La realidad de la ayuda 1997Ed. INTERMÓN. 1997. 142 págs. ISBN 84-921-977-7-3La realidad de la ayuda 1997 constituye el quintoanuario de una serie sobre la ayuda oficial al desa-rrollo española e internacional, en el que INTERMÓNy otras 30 organizaciones no gubernamentales eva-lúan la cooperación internacional. Nueve de estasP

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MIGRACIONES FORZOSAS revista 35enero - abril 1998, 1

organizaciones pertenecen a países delSur receptores de ayuda y las 21 restan-tes, a los países donantes miembros delComité de Ayuda al Desarrollo (CAD) dela OCDE. Además de una detallada valo-ración de la ayuda oficial española,ofrece una evaluación general de la coo-peración al desarrollo que realizan lospaíses miembros del CAD así como unanálisis de la cooperación en AméricaLatina y de la realizada por la ComisiónEuropea y por el Banco Interamericanode Desarrollo.

Contacto: INTERMÓN, Roger de Llúria15, 08010 Barcelona. Tel.: +34-934820700. Fax: +34-93 4820707.

La situación de los refugia-dos en el mundo 1997-1998.Un programa humanitarioACNUR 1997. Ed. ICARIA. 326 págs. ISBN 84-7426-339-5.El informe sugiere que los refugiados ylos problemas humanitarios son denaturaleza transnacional, no sólo por-que implican movimientos de personasque cruzan las fronteras de los países,sino también porque, como seres huma-nos, somos responsables de salvaguar-dar la seguridad de todos. Se puedenencontrar propuestas y recomendacio-nes prácticas sobre el problema de losdesplazamientos forzosos. Se abordanen el libro informes sobre los GrandesLagos, Asia Central, el Cuerno de África,México, Colombia, Sudán, Bosnia, etc.Contacto: ACNUR, Av. General Perón 32-2º, 28020 Madrid. Tel.: +34-91 5563503.Fax: +34-91 5558632. El libro seencuentra en librerías.

Los niños refugiados.Directrices sobre protección ycuidadoACNUR. Versión castellana por el IMSERSO.1997. 190 págs. Este libro se escribió pensando en elpersonal que trabaja sobre el terreno,para encontrar una visión panorámicasobre los temas y también unas directri-ces para resolver problemas específicos.Se ha redactado un índice pormenoriza-do con el objeto de que los trabajadoressobre el terreno puedan encontrar conrapidez las respuestas a los problemasconcretos. Al final de cada capítulo hayun test de evaluación. No obstante, estelibro no es un manual práctico sino uninstrumento de apoyo para el trabajo,adaptándolo a las condiciones y situa-ciones concretas en cada caso.Contacto: ACNUR, Av. General Perón 32-2º, 28020 Madrid. Tel.: +34-91 5563503.Fax: +34-91 5558632.

Enfoque psicosocial de laayuda humanitaria. TextosbásicosPor Carlos Martín Beristain y Giorgia Donà.Editado por el Instituto de Derechos Humanos dela Universidad de Deusto, Bilbao.El objetivo de esta serie de textos bási-cos es la publicación de materiales ori-ginales y de relevancia que desarrollenlos distintos aspectos que intervienenen la ayuda humanitaria internacional.La serie desarrolla, entre otros, losaspectos geopolíticos, jurídicos, antro-pológicos, psicosociales, médicos,medioambientales, éticos y de gestiónde la ayuda humanitaria.Contacto: Instituto de DerechosHumanos, Universidad de Deusto,Apartado 1, 48080 Bilbao.

¿Hacia dónde va Colombia?Una mirada desde AntioquiaEditado por el Instituto Popular de Capacitación,área de Derechos Humanos, varios investigado-res del Equipo Violencia y Derecho Humanitarioen Antioquia. Medellín, mayo de 1997. 222págs.Esta investigación estudia la situaciónproducida por la violencia y el impactode ésta en materia de DerechosHumanos y del Derecho InternacionalHumanitario. Se ha pretendido estable-cer un diagnóstico que permita aportarluces para una mejor comprensión delas causas de las prácticas violatorias yde los comportamientos de distintosactores sociales, presentando propues-tas y recomendaciones globales sobrelos temas tratados.Contacto: Instituto Popular deCapacitación – I.P.C., Carrera 45D 60-16M Medellín, Colombia. Tel.: 2849035.Fax: 2543744. Correo electrónico:[email protected]

1996 ECHO Informe Anual.Retorno a RuandaAnualmente ECHO, además de suspublicaciones puntuales, publica elInforme Anual en el que muestra el tra-bajo realizado a lo largo del año en lasregiones donde ha intervenido. En esteinforme se resumen las situaciones deemergencia y de ayuda humanitariaprestada en los Grandes Lagos, Bosnia-Herzegovina, Cáucaso, Afganistán,Chechenia, Camboya, Angola, Liberia,Sudán, América Central, Líbano yPalestina.Contacto: Para esta publicación y otrasde ECHO, la dirección es COMISIÓNEUROPEA, ECHO, 200 Rue de la Loi, B-1049 Bruselas, Bélgica.

La hora de la partida.Fuerzas que generan refugia-dos y emigrantesPor Hal Kune, Ed. Bakeaz, 1997. 66 págs.Corresponde a la traducción del inglésdel libro The Hour of Departure: Forcesthat Create Refugees and Migrants,publicado por el Worldwatch Institutede EE.UU. Hal Kune argumenta que dehecho se puede dar una solución a losfactores que obligan a la gente a huir desu país, al igual que se pueden reducirlos desplazamientos no deseados. Porejemplo, las presiones derivadas de laescasez de tierras contribuyeron al esta-llido de la guerra en Ruanda, y la esca-sez de agua ha forzado la migración demillones de chinos de las áreas rurales.Se proponen políticas económicas ysociales destinadas a detener la mareade desposeídos en todo el mundo.Contacto: Bakeaz, Av. Zuberoa 43 bajo,48012 Bilbao. Tel.: +34-94 4213719.Fax: +34-94 4216502.

ANUARIO CIP 1997. Las guerras modernas: pobreza,recursos, religiónCentro de Investigaciones para la Paz. Duquede Sesto 40, Madrid. Tel.: +34-91 4310280.Fax: +34-91 5779550. Correo electrónico:[email protected] artículos sobre Guatemala,Perú, Oriente Próximo, Kurdistán,Chechenia, Bosnia, Chipre, Zaire,Filipinas, así como debates sobre laayuda humanitaria de la Unión Europeaen 1996.

Revista Nueva SociedadApartado 61.712, Caracas 1060-A, Venezuela.Tel.: +58-2-2673189. Fax: +58-2-2673397.Correo electrónico: [email protected](distribución y ventas)Es una revista latinoamericana abierta atodas las corrientes de pensamientoprogresista, que se publica cada dosmeses y circula en toda América Latina.El nº 153 (ene-feb 98) contiene artículoscentrados en la cuestión indígena envarios países.

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MIGRACIONES FORZOSAS revista36 enero - abril 1998, 1

Seguimiento de laConferencia sobreMigración de la CEI,Ginebra, Mayo 1996

por Arthur C. Helton, Director,Proyectos sobre MigraciónForzosa, Open Society Institute

La Conferencia de la CEI sobre cuestionesrelativas a la migración produjo como

resultado un Programa de Acción para gestio-nar y evitar la migración forzosa en la anti-gua Unión Soviética [1]. A pesar de la relati-vamente baja prioridad concedida al procesode la Conferencia por parte de la CEI y de losEstados occidentales donantes, 1998 deberíaofrecer oportunidades a las organizacionesinternacionales y no gubernamentales parallevar a cabo iniciativas sustanciales con elfin de paliar las penalidades de los emigran-tes forzosos de la zona. Aunque la llamadaconjunta de 88 millones de dólares en 1997realizada por el ACNUR y la OIM sólo halogrado reunir 25 millones de dólares, elACNUR ha recibido 850.000 dólares delmillón de dólares que solicitó para un Fondode ONG destinado a desarrollar actividadesen el sector independiente de la región. ElACNUR y la OIM están preparando distintasapelaciones para 1998 por un total de casi 50millones. Dada la respuesta conocida de losdonantes durante el pasado año, es probableque las actividades contempladas para el añopróximo estén más perfeccionadas.

La implicación de las ONG en el proceso deseguimiento continúa siendo controvertida.Por ejemplo, a principios de diciembre de1997, el ACNUR y la Oficina de laOrganización para la Seguridad y laCooperación en Europa para las InstitucionesDemocráticas y los Derechos Humanos consede en Varsovia, organizó una reunión defuncionarios gubernamentales para debatirlos procedimientos de registro del lugar deresidencia en los países de la CEI. No se invi-tó a asistir, lamentablemente, a las ONGinternacionales, sugiriendo que la implica-ción de las ONG en el proceso de seguimien-to debe estar limitada y segregada, sentandolas bases de la polarización y la no coopera-ción en la región.

Un desarrollo potencialmente más positivopara el sector independiente es el estableci-

miento de un comité de seguimiento de lasONG, integrado por grupos de trabajo sobremarcos institucionales, asistencia de emer-gencia y humanitaria, soluciones para perso-nas desplazadas, prevención, previsión yprotección a refugiados. En relación a esto,los Proyectos sobre Migración Forzosa delOpen Society Institute se han comprometidoa dirigir el grupo de trabajo sobre marcosinstitucionales para promover la reforma delas leyes que rigen el registro y la fiscalidadde las ONG en los Estados miembros de laCEI. Las complejas legislaciones sobre regis-tro y fiscalidad a lo largo de la CEI limitangravemente la capacidad de las ONG para tra-bajar. La reforma de estas leyes crearía unmejor entorno operativo, promoviendo lacapacidad de las ONG locales. Una mayoractividad de las ONG estimularía a su vez eldesarrollo de una sociedad civil activa.

Los Proyectos sobre Migración Forzosa estánplaneando, junto con el ACNUR y el Consejode Europa, organizar cuatro conferencias en1998 en la región -en Rusia, Ucrania, elCáucaso y Asia Central- para apoyar estosfines. El objetivo último es establecer una redde grupos de trabajo nacionales integradapor representantes de agencias gubernamen-tales, ONG y organizaciones internacionales,que recibirán el encargo de diseñar y poneren marcha leyes fiscales y de registro (en suspaíses) que sean más beneficiosas para lasONG.

La puesta en marcha del Programa de Acciónde la Conferencia de la CEI está en la encruci-jada. Se encuentra actualmente en peligro deconvertirse en otra oportunidad perdida paratratar las penalidades ocasionadas por elhundimiento de la Unión Soviética. El proce-so de seguimiento de la Conferencia de la CEIfracasará si no se aumenta significativamentela implicación de las ONG y el respaldo a lasdonaciones continuadas.

[1] Véase el informe sobre la Conferencia de la CEI, Boletíndel Global IDP Survey newsletter, otoño 1997, p. 7.

Conferencia sobreRefugiados deEritrea, Jartum,Sudán, 6-7 de julio,1997

La primera Conferencia sobre Refugiados deEritrea tuvo lugar en Jartum, Sudán, en

colaboración con el Disaster Management andRefugee Studies Institute (DIMARSI). Entre losparticipantes se encontraban representantesde 27 asentamientos de refugiados, ONGinternacionales y locales, así como miembrosde la comunidad académica. La conferencia

trató cuestiones como el impacto psicológicoy social del desplazamiento y la cuestión dela repatriación voluntaria. Para recibir unacopia del informe de la conferencia, póngan-se en contacto con: DIMARSI, PO Box 8300,Imarat, Khartoum, Sudán. Fax: +249-11-271843.

ConferenciasConferencias

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MIGRACIONES FORZOSAS revista 37enero - abril 1998, 1

Aesta consulta, celebrada bajo losauspicios del Gobierno de Austria,

asistieron unos 30 expertos sobre cues-tiones jurídicas y sobre el terreno,implicados con la normativa y la buenapráctica relativa a DI. Un grupo dejuristas internacionales expertos, bajola dirección del Dr. Francis Deng(Representante Especial del SecretarioGeneral de N.U. sobre los DI), ha prepa-rado una propuesta de principios guíabasados en la compilación y el análisisde normas jurídicas aplicables a los DI,que fue entregado a través de laComisión de Derechos Humanos en1996. Este trabajo ha sido refundido enun documento de 12 páginas que inclu-ye 30 principios. El propósito de laConsulta de Viena era terminar estedocumento.

Los 30 principios directrices serán pre-sentados a la Comisión de DerechosHumanos en marzo de 1998. No es undocumento jurídicamente vinculante,ni una declaración, por lo que norequiere un apoyo formal de losEstados miembros de N.U. Los princi-pios relativos a la protección y asisten-cia a los DI a menudo señalan a la res-ponsabilidad de los gobiernos; el docu-mento, sin embargo, no menciona lacuestión de la soberanía, evitando asílas objeciones potenciales por parte delos gobiernos. Al contrario, los princi-pios directrices se remiten al Derechoconsuetudinario o a las normas ya con-tenidas en el Derecho internacionalhumanitario y en el Derecho de losderechos humanos. A este respecto,son una simple reafirmación de normasexistentes que ponen un énfasis espe-cial en la situación de los desplazadosinternos.

La consulta de Viena estudió la mejormanera de difundir los principiosdirectrices entre los actores implica-dos: gobiernos, agencias de ayuda y lospropios DI. Las agencias de N.U. -espe-cialmente UNICEF, PNUD y PMA- losincorporarán en su práctica sobre elterreno y en sus manuales. Es probableque las agencias intergubernamentalesy las ONG se muestren receptivas a losencillo del lenguaje y la brevedad desu presentación. Se está planeando lacreación de una serie de talleres regio-nales a través del nuevo Consorciosobre DI (para más información, verpág. 41). En último lugar, y quizá loque es más importante, se realizaránesfuerzos para fortalecer la experienciadel CICR en la difusión de normas jurí-dicas a los soldados, personal local ylos propios DI. La última prueba paralos principios directrices será hastaqué punto favorecen a los DI, evitanlos abusos de los derechos humanos ypromueven actuaciones más aceptablespor parte de todos los autores hacia losdesplazados de todo el mundo.

Estimada Directora,

En el número 21 de la RPN (abril de 1996), p. 30,Agustín Velloso escribió sobre la educación en la“República Árabe Saharaui Democrática”. Encuentroque las “premisas” de este artículo reflejan exacta ysolamente las tesis del Polisario. Así que me gustaríaaclarar algunos puntos importantes:

1. En efecto, hubo un acuerdo en Madrid que puso fina la ocupación española del “Sáhara Occidental”.Aunque muchos marroquíes no estaban a favor,Marruecos aceptó la partición con Mauritania parademostrar su buena voluntad con respecto a los quese mostraban dispuestos a escuchar a Argelia acusar aMarruecos de hegemonía. Fieles a su compromiso conuna resolución pacífica de las controversias, ésta noera la primera vez que Marruecos negociaba conEspaña sobre la devolución de una parte de su territo-rio: lo hizo en 1969 cuando recuperó el enclave deIfni, al sur de Agadir, y todavía propone hacer lomismo con respecto a los enclaves mediterráneos deCeuta y Melilla, y las Islas Chafarinas, todavía bajodominio colonial español.

2. Es más, en conformidad con la resolución de laAsamblea General 1514 (XV), de 1960, sobre laautodeterminación, el presidente y muchos miembrosde la Asamblea Local (Jemaa), el órgano representa-tivo de la población, renovó su fidelidad (baïa) al Reyde Marruecos, dejando claro que son marroquíes.

3. El problema de los refugiados no surgió porque “elpueblo saharaui empezó una guerra de autodetermina-ción y miles de civiles huyeron a la seguridad deArgelia...”, sino más bien porque una pequeña mino-ría de la población, concretamente un movimientopolítico y armado formado en el momento más álgidode la Guerra Fría por instigación y con el apoyo deArgelia, empujó a dichos civiles fuera de sus hogares,

bien al contarles historias de atrocidades y masacresvenideras por parte de los que Velloso llamó la “inva-sión militar marroquí”, o bien por medio de la fuerza.

4. Por lo que se refiere a este último punto, cuandoun país, sea Marruecos o cualquier otro, recuperaparte de su territorio, es bastante habitual que dichoEstado envíe tropas militares y establezca cuarteles,así como servicios públicos y funcionarios. Pero cuan-do Marruecos descubrió que su vecino, aunque siem-pre dijera lo contrario, estaba realmente interviniendoen este asunto no sólo al armar al Polisario sino alenviar soldados (algunos de los cuales fueron hechosprisioneros en Amgala), envió más fuerzas.

5. Si España, tras las negociaciones con Marruecos,se retirara de Ceuta, Melilla y las Islas Chafarinas,¿se esperaría que Marruecos se abstuviera -debido alsurgimiento de un movimiento como el Polisario- deenviar tropas militares, policía y otros funcionariospara poder ejercer efectivamente sus derechos sobera-nos, y se exigiría que Marruecos organizara un refe-réndum? Si así fuera, el Reino Unido debería habersolicitado lo mismo de China en el caso de HongKong... pero, ¿para qué? Para continuar aplicando, demanera consciente o inconsciente, la antigua máximapolítica colonial “divide y gobierna”, que ha gozadode tan gran éxito histórico en despedazar a la comuni-dad internacional, especialmente en los países endesarrollo.

El Arbi Mrabet, Decano de la Facultad de Derecho,Universidad de Oujda, Marruecos.

Consulta de Expertossobre la Propuesta dePrincipios Directricessobre el DesplazamientoInterno, Viena, Austria,12-18 de enero, 1998

por Jon Bennett, Director, Global IDPSurvey

Car tasCartas

Madre e hijo,Sáhara Occidental

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Investigación

MIGRACIONES FORZOSAS revista38 enero - abril 1998, 1

Personas que se quedan:migración, desarrollo y losque quedaron atrásLa mayor parte de la investigación sobremigraciones se ha centrado en los queabandonan sus hogares, voluntaria o for-zosamente. Se ha prestado mucha menosatención a los que quedan atrás, a pesarde que dichas personas son parte inte-grante de cualquier migración. Este pro-yecto es un estudio comparativo de lamigración “económica” y la “forzosa”, quese centra en las perspectivas de desarro-llo de los que se quedan y sus relacionescon los que se marchan. El estudio inves-tiga los hogares y su influencia sobre ladecisión de emigrar, los efectos de lamigración sobre dichos hogares, y elimpacto de las transferencias monetarias.Se tratarán cuestiones relativas al desarro-llo, la voluntad de emigrar, las diásporasy las comunidades transnacionales. Se tra-bajará sobre el terreno en Ghana y SriLanka en 1998, y en bibliotecas de África,Oriente Medio y Asia, para estudios com-parativos.

Dirigida por Nicholas Van Hear (RSP).Habrá un equipo de investigadores enOxford y en el terreno. El proyecto empe-zó en octubre de 1997 y durará dos años.Financiado por el Instituto Leverhulme.

Proyecto sobre humanitaris-mo y guerra: nuevas basespara la investigaciónTras el final de la Guerra Fría, las agenciashumanitarias se enfrentan a innumerablescambios. Durante los próximos años, elProyecto se centrará en las innovacionesrealizadas por estas agencias para enfren-tarse a dichos cambios. El proyecto tienesu sede en la Instituto para EstudiosInternacionales Thomas J. Watson Jr, de laUniversidad de Brown (Providence,EE.UU.). El objetivo es analizar solucionescreativas para los retos posteriores a laGuerra Fría.

La investigación se organiza en tres gru-pos: la interacción humanitaria examinalos retos de organización de emergenciasy protección de derechos humanos en laayuda de emergencia. Las políticas huma-nitarias analizan las dificultades de prote-ger el espacio humanitario y potenciar eltrabajo de cara a la resolución del conflic-to. Los impactos humanitarios estudianlos esfuerzos para vincular la ayuda deemergencia con el desarrollo y el fortale-cimiento de las instituciones locales. Alfrente del trabajo se encuentran respecti-vamente: Giles Whitcomb, ex-funcionario

de NU y actualmente consultor privado;Neil McFarlane, Catedrático de RelacionesInternacionales de la Universidad deOxford; e Ian Smillie, analista indepen-diente de cuestiones sobre el desarrollo.

El proyecto actualizará estudios anterio-res realizados desde 1991 sobre las res-puestas humanitarias a crisis en determi-nadas áreas geográficas, y examinará nue-vos conflictos. Una parte fundamental dela investigación se centrará en los refugia-dos y las poblaciones desplazadas.Examinará las dificultades de proteger losderechos humanos a la vez que se propor-ciona asistencia.

Los codirectores del Proyecto LarryMinear y Thomas G. Weiss llevarán a cabouna serie de diálogos regulares con gru-pos internacionales de ayuda en Europa yNorteamérica, publicarán artículos yresultados de investigaciones para su usoen cursos. Se puede obtener informaciónadicional en:

http://www.brown.edu/Departments/Watson_Institute/H_W/

El derecho a no ser desplazado arbitrariamenteLa sesión de marzo de 1998 de laComisión de Derechos Humanos de NUexaminará un estudio sobre el derecho ano ser desplazado arbitrariamente(Documento de NUE/CN.4/1998/53/Add.1), preparado por elRepresentante del Secretario General paralos DI, el Dr. Francis Deng. El estudio ana-liza la protección contra el desplazamien-to arbitrario por parte del Derecho inter-nacional. Dicha protección jurídica se for-talecería con un derecho a no ser despla-zado arbitrariamente, que expresaría lanorma de Derecho internacional generalya existente que prohíbe el desplazamien-to, excepto por causas excepcionales, encuyo caso lo somete a importantes limita-ciones (que no sea discriminatorio ni arbi-trario). Deben clarificarse las garantíasprocesales mínimas y las bases de su per-misibilidad. La articulación de dicho dere-cho tendría consecuencias preventivas yaportaría la base jurídica para la acciónpreventiva.

Para más información, contactar con: ErinMooney, Human Rights Officer, UN HighCommissioner for Human Rights, Palaisdes Nations, CH-1211 Geneve 10, Suiza.Tel: +41 22 917 3528. Fax: +41 22 9170092. Correo electrónico:[email protected]. La copia delinforme puede obtenerse en:www.unhchr.ch

Reintegración de los hogaresde desplazados internoscuyo cabeza de familia esuna mujer, Etiopía.La Organización Internacional del Trabajo(OIT) y el Ministerio Etíope de Trabajo yAsuntos Sociales estudiaron las cualifica-ciones para el mercado laboral y el poten-cial de integración en el mercado de unos3.874 hogares encabezados por mujeres,en 17 campos de Addis Abeba y sus alre-dedores, que acogen a unos 55.000 DI. En1997 se celebró una reunión para estudiarnuevas actividades de integración. El estu-dio encontró un alto nivel de motivaciónentre las mujeres. Estudió su potencialpara integrarse según la alfabetización,edad y salud, y estudió los recursos y lafinanciación, formación y educación, elacceso a los créditos, la creación deempleos, la planificación y el activismo, lamovilización social a través de los mediosde comunicación, y el seguimiento. Secreará un Comité Permanente para lapuesta en práctica de las recomendacio-nes. Los documentos de la reunión sepueden obtener en: NGO NetworkingService, Inter Africa Group, PO Box 1631,Addis Abeba, Etiopía. Fax: +251 1 517554.Correo electrónico: [email protected] más información sobre el informe dela OIT y del Ministerio: Yoggi Bakker, OIT,Addis Abeba, Etiopía. Fax: +251 1 513363. Correo electrónico: [email protected]

La infancia y los derechoshumanos en los conflictosarmados: ColombiaDirigido por Mariano Aguirre, delCentro de Investigaciones para la Paz(Madrid, España). El proyecto busca pro-mover el respeto a los derechos de losniños en los conflictos armados. Tratatres aspectos: i) un caso práctico enColombia; ii) el apoyo de las ONGcolombianas para proporcionar alterna-tivas concretas para los niños que sonreclutados forzosamente, y iii) una cam-paña educativa. El proyecto se llevará acabo junto con el Programa deReinserción y el Observatorio deConflictos, ambos en Bogotá. Para másinformación: Jéhane Sedky-Lavandero,CIP, C/Duque de Sesto 4, 28009 Madrid,España. Tel: +34 91 431 0280. Fax: +3491 577 9550. Correo electrónico:[email protected]

Investigación

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MIGRACIONES FORZOSAS revista 39enero - abril 1998, 1

Este libro, escrito por Bob Sutcliffe,pretende resumir una gran diversi-dad de documentación y literaturareciente, internacional, tanto científi-ca como política, sobre la migraciónen general. En la primera parte seobserva que la migración en elmundo de hoy es un fenómeno incó-modo. Incómodo, evidentemente,para los que están forzados y cadavez más también para muchos queeligen emigrar para mejorar su vidaporque se enfrentan a obstáculoscada vez más difíciles. Pero incómo-do también en un sentido teórico. Enmuchos enfoques y doctrinas dondehay lógicamente un sitio para lamigración internacional, misteriosa-mente no aparece. Ni en la economíaortodoxa, ni en las teorías de desa-rrollo, ni en los discursos sobre losderechos humanos aparecen referen-cias a la migración internacional.

El debate sobre la migración, queincluye argumentos a favor de unalibertad real de movimiento en elmundo, está basado sobre la ideaextendida pero criticable de que lamigración es un fenómeno excepcio-nal. En las utopías, como visión de lasociedad ideal, no se incluye la ideade libertad de movimiento.

La rareza de argumentos a favor deuna libertad real de movimiento en elmundo se basa en parte en una opi-nión extendida pero criticable de quela migración es un fenómeno excep-cional, y que la libertad de movi-miento no se incluye en las utopías.

La parte central del libro consiste enuna visión general de mucha eviden-cia empírica sobre la cantidad, formay consecuencias de las migraciones

recientes, tanto del Sur al Norte comotambién dentro del Sur, donde unagran cantidad de información estapresentada de forma accesible concuadros, mapas y gráficos. Se dedicaatención especial a los efectos socio-demográficos en los países de desti-no, a las remesas y sus efectos eco-nómicos y a las diferencias de génerocon relación a la migración. En laparte final el autor argumenta que lamigración puede jugar un papel másimportante y más positivo en las teo-rías de desarrollo, y esto constituyeun argumento más para un enfoquemucho más libre frente a la inmigra-ción en los países desarrollados.Aunque esto se argumenta en parteen términos económicos, el autorconcluye que el mejor punto de parti-da para abordar la cuestión de lamigración internacional y su relaciónal desarrollo es desde los derechos ydesde el concepto de la ciudaníainternacional.

La investigación es dirigida y realiza-da por Bob Sutcliffe, profesor deEconomía Mundial en la Universidaddel País Vasco y responsable del áreade investigación del Instituto Hegoa.La investigación es parte de un pro-yecto más amplio cofinanciado por laSecretaría de Estado para laCooperación Internacional y paraIberoamérica (SECIPI) del Ministerioespañol de Asuntos Exteriores. Sufinalización y publicación está pre-vista para el mes de junio de 1998.Para más información, contactar conHegoa.

Tel.: +34-94-4473512. Fax: 4762653.E-mail: [email protected]

HEGOA viene desarrollando, desde enero de 1998 hasta enero del 2000,un proyecto de investigación bibliográfica orientado a producir variaspublicaciones con las que difundir en el mundo hispanohablante los deba-tes internacionales y el conocimiento actual en materia de seguridad ali-mentaria, ayuda de emergencia y cooperación para el desarrollo. El pro-yecto es dirigido por Karlos Pérez de Armiño, y contará además con lacolaboración de otros investigadores.

A pesar del creciente interés social por los temas del desarrollo y la coo-peración, palpable por ejemplo en el aumento de las actividades de lasONG y en el surgimiento de numerosos cursos y másters especializados,es evidente que el nivel de formación teórica y técnica en este campo esinferior en el Estado español que en otros países europeos. A ello contri-buyen factores como la menor tradición de su cooperación, la escasez deinvestigaciones y publicaciones especializadas en castellano, y la barreraidiomática, que limita la difusión de los debates internacionales manteni-dos en inglés.

El proyecto persigue, por tanto, proporcionar unos materiales que, combi-nando el rigor científico con un talante divulgativo, ayuden a incrementarel conocimiento teórico sobre la materia por parte de los profesionales dela cooperación (tanto de ONG como de las instituciones públicas), el per-sonal docente y los estudiantes universitarios, y la opinión pública engeneral.

En primer lugar, se publicarán tres Cuadernos de Trabajo, que serán dis-tribuidos entre varios cientos de personas e instituciones interesadas enla materia. El primero de ellos analizará las perspectivas del hambre en elmundo en las próximas décadas, observando las tendencias en cuanto acrecimiento demográfico, producción de alimentos y pobreza. Particularatención se prestará a los debates habidos en la última Cumbre Mundialsobre la Alimentación. El segundo cuaderno se ocupará de la ayuda ali-

mentaria de la Unión Europea, en particular de las implicaciones delnuevo reglamento en la materia aprobado en 1996. El tercer cuaderno, porsu parte, analizará los debates existentes en cuanto a la vinculación entrela ayuda de emergencia y la de desarrollo.

Otro producto del proyecto consistirá en la publicación de un libro sobrela ayuda alimentaria, en el que se analizarán sus potencialidades y riesgosde cara a la consecución de la seguridad alimentaria, así como los distin-tos mecanismos por los que se puede llevar a cabo. Se analizarán igual-mente otros tipos de políticas contra el hambre, complementarias o alter-nativas a la ayuda en forma de comida.

La última publicación consistirá en un diccionario sobre ayuda humanita-ria y cooperación para el desarrollo, que incluirá la definición y explica-ción de unos 300 conceptos, acompañados de gráficos y referenciasbibliográficas básicas. Esta obra pretende sintetizar el contenido de losdebates actuales en este campo, recogiendo aportaciones de diferentesdisciplinas, como la economía, la antropología, el derecho o las relacionesinternacionales.

El diccionario, concebido como un material de consulta y estudio, puederepresentar un valioso instrumento para sintetizar y difundir el pensa-miento actual en materia de desarrollo y ayuda internacional, sobre todosi tenemos en cuenta que tampoco en inglés existe una obra de este tipo.También puede permitir acuñar en castellano diferentes conceptos técni-cos que cuentan ya con un amplio uso en inglés.

Este proyecto a dos años está cofinanciado por la Agencia Española deCooperación Internacional y la Dirección General de Desarrollo de laUnión Europea. Para más información, contactar con Karlos Pérez deArmiño en Hegoa. Tel.: +34-944473512. Fax: +34-94762653.E-mail: [email protected]

Guia da reabilitação pós-guerra. O pro-cesso de MOÇAMBIQUE e a contribuiçãodas ONGPublicado por HEGOA. Autor: Karlos Pérez de Armiño, traducidoal portugués por João José Fernándes, de la ONG OIKOS, Lisboa.1997.196 págs. ISBN 84-89916-00-4.

El libro es la tra-ducción al portu-gués, para los paí-ses lusófonos, de laedición en castella-no publicada porHegoa en 1997 -Guía de rehabilita-ción posbélica enMozambique. Elproceso deMozambique y lacontribución de lasONG-, fruto de unainvestigación dedos años. El libroaborda los debatesteóricos en torno alas cuestiones rela-cionadas con losconflictos, la gue-rra y los desastreshumanitarios enÁfrica. Se plantea elreto de articular

mecanismos para vincular la ayuda humanitaria con eldesarrollo, cubriendo el vacío existente entre ambas. Ellibro ofrece reflexiones y criterios que pueden estimu-lar el debate y orientar el trabajo de las ONG y demásinstituciones involucradas en tales procesos. El libro ensus dos ediciones ha sido cofinanciado por la AgenciaEspañola de Cooperación Internacional, AECI, delMinisterio de Asuntos Exteriores.Contacto para la edición en castellano y portugés:HEGOA, Lehendakari Aguirre 83, 48015 Bilbao. Tel.: +3494-4473512. Fax: +34-94 4762653. Correo electrónico:[email protected] portugués se puede solicitar a OIKOS, Rua deSantiago 9, 1100 Lisboa, Portugal. Tel.: +351-1-8866134. Fax: +351-1-8878837. Correo electrónico:[email protected]. Precio: 500 escudos más gastos deenvío.

NACIDO EN OTRA PARTEUn ensayo sobre la migración internacional, el desarrollo y laequidad Bob Sutcliffe

Proyecto de investigación y formación en materia de seguridad alimentaria, ayuda humanitaria y cooperación

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MIGRACIONES FORZOSAS revista40 enero - abril 1998, 1

Máster de Estudios sobreMigración Forzosa

Desde octubre de 1998, el RSP ofrecerá unMaster of Studies in Forced Migration. Éste esun curso de posgrado basado en una perspec-tiva multidisciplinar que incluye la antropolo-gía, el Derecho, las políticas y las relacionesinternacionales. Incluirá cursos y seminariossobre:◆ Introducción al estudio de la migración forzo-sa◆ Las políticas internacionales y nacionales dela migración forzosa◆ Derecho internacional de los derechos huma-nos y de los refugiados◆ Nacionalismo, regionalismo y etnicidad en laexplicación del desplazamiento humano◆ Métodos de investigación◆ Cuestiones y controversias en la migraciónforzosaSe puede solicitar información en:Graduate Admissions Office, University Offices,18 Wellington Square, Oxford, OX1 2JD,Reino Unido. Tel: +44 1865 270055E-mail: [email protected]

Escuela Internacional de Verano 1998, 6-31 de julio de1998 (jornada completa)Esta Escuela de Verano tiene por objeto aportar a quienes trabajan con refugiados y otrosmigrantes forzosos una comprensión más amplia del marco institucional que domina su mundo yel de quienes han sido obligados a desplazarse. Los objetivos de la Escuela de Verano son pro-porcionar a los participantes: un marco multidisciplinar; una perspectiva comparada sobre losdistintos temas; un foro para el análisis de los problemas de los programas de asistencia; y lapuesta en común de las experiencias que han tenido éxito. Se espera que entre los participanteshaya funcionarios gubernamentales de alto y medio nivel, así como personal gubernamental yno gubernamental implicado en la elaboración de políticas y puesta en marcha de la asistenciadirigida a los migrantes forzosos. Coste: 1.950£ (incluye alojamiento y desayuno). Lugar: RuskinCollege, Oxford.

Pueden ser Miembros Visitantes del RSP los profesionales superiores y medios, así como quie-nes trabajan en la elaboración de las políticas, que deseen pasar un período de estudio y refle-xión en un entorno académico, así como a los miembros de la comunidad académica y losinvestigadores que trabajan en campos relacionados con la migración forzosa. Normalmente,se asignará a cada Miembro un asesor académico y se esperará que lleve a cabo un progra-ma específico autodirigido de estudio o investigación. Este puesto puede ocuparse durante uno,dos o tres trimestres de un año académico. Normalmente no habrá más de diez MiembrosVisitantes en el RSP al mismo tiempo.Se puede solicitar más información en: The Visiting Fellowships Administrator, RSP (dirección enla pág. 2). Correo electrónico: rspedu(qeh.ox.ac.uk

Cursoscursos

La Cooperación para el Desarrollo requie-re cada vez de una mayor cualificación.

A lo largo de los últimos años, las actividades ylos programas relacionados con la Cooperaciónal Desarrollo han alcanzado una gran dimensiónen el País Vasco, involucrando en ellos a un cre-ciente número de personas. Este-importanteimpulso de la Cooperación Internacional para elDesarrollo ha sido posible gracias a la crecientesensibilización de nuestra sociedad ante losgrandes retos derivados de desigualdad existen-te en el mundo y que se traducen en un grancúmulo de problemas relacionados con el ham-bre, la salud, la formación, el empleo, los dere-chos humanos, el medio ambiente, o la discri-minación de las mujeres. La creciente sensibili-zación de nuestra sociedad se ha plasmado enla creación de un gran número deOrganizaciones No Gubernamentales dedicadasa la Cooperación Internacional, así como en elcada vez mayor número de personas que emple-an una parte de su tiempo en estas tareas.Asimismo ha sido muy notable el incremento delos fondos públicos destinados a la Cooperaciónpara el Desarrollo. Sin embargo, el auge alcan-zado por los programas y proyectos de coopera-ción plantea a su vez nuevos retos, pues si bienlas actitudes solidarias constituyen una baseinsustituible e indispensable, no es menos cier-

to que la complejidad creciente de dichas tareasexige un grado de conocimientos y de prepara-ción que no siempre se da.

Por todo ello, la formación en cooperación, laaproximación teórica a los principales proble-mas del desarrollo? y el estudio de las técnicasrelacionadas con la puesta en marcha de pro-yectos y programas constituyen una necesidadtanto para las personas que dedican parte de sutiempo a estas cuestiones como, sobre todo,para aquellas otras que desean hacer de la coo-peración su principal actividad.

Características generales del programa

El presente programa de formación enCooperación y Desarrollo pretende cubrir variosobjetivos concretos:

- Ofrecer un marco general de formaciónsobre el Desarrollo y la CooperaciónInternacional.

- Posibilitar la obtención de una titulaciónuniversitaria en estas materias.

- Ofrecer una formación especializada enCooperación en Salud, Desarrollo Rural,Gestión y Logística, DD.HEI, Medioambientey Género.

Para ello, se plantea una oferta múltiple:

- Un curso de un año académico de dura-

ción (280 horas) que da acceso a la titula-ción de Especialista Universitario enDesarrollo y CooperaciónInternacional.

- Un curso de dos años académicos deduración (510 horas) que da acceso a latitulación de Master Universitario enDesarrollo y CooperaciónInternacional.

- Seis cursos alternativos de aproximada-mente cuatro semanas de duración (30horas), a elegir cuatro, sobre Salud yCooperación, Desarrollo Rural, Gestión yLogística, Cooperación Medioambiental,Derechos Humanos, Género y Desarrollo.

El curso de Especialista Universitario cuenta conun programa de prácticas en sede. El curso deMaster Universitario cuenta con un programa deprácticas en sede y sobre el terreno.

Para información: Instituto de Estudios sobre elDesarrollo y la Economía Internacional. HEGOA.Facultad de Ciencias Económicas. Avda.Lehendakari Agirre 83. 48015 BILBAO. Tfnos: 94-4473512; Fax: 94-4762653; Correo electrónico:[email protected] http//www.ehu.es/hegoa

Programa de Formación en Cooperación para el Desarrollo 1998-2000 de HEGOACURSOS DE POSTGRADO: ESPECIALISTA UNIVERSITARIO Y MASTER UNIVERSlTARIO EN DESARROLLO Y COOPERACION INTERNACIONAL

Programa patrocinado por la Secretaría de Acción Exterior del Gobierno Vasco. Este programa, se inscribe en el marco del Conveniosuscrito entre el Gobierno Vasco y la UPV/EHU para la colaboración en el impulso de la Cooperación al Desarrollo.

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news

MIGRACIONES FORZOSAS revista 41enero - abril 1998, 1

La DirecciónEl Global IDP Survey, como proyecto del Consejo

Noruego para los Refugiados, está administrada através de su oficina de Ginebra. Su personal se

encuentra en varias sedes de Europa y tiene unos40 delegados y asesores en todo el mundo.

También tiene una Junta Académica Asesora de15 expertos en el campo de la migración forzosa.

PersonalDirector: Jon Bennett

Director de Gestión: Janie HamptonRepresentante del CNR, Oficina de Ginebra:

Brita SydhoffAdministrador/Oficial de Proyectos, Ginebra:

Gry Sando

Patrocinadores del Global IDP Survey

Department for International Development (DFID),Reino Unido; Ministerios de Asuntos Exteriores deNoruega, Dinamarca, Países Bajos, Suiza;International Development Research Centre,Canadá; Norwegian Church Aid; Rädda Barnen,Suecia; Redd Barna, Noruega; World VisionInternational; Individuel Människahjälp, Suecia;UNICEF; PNUD; PMA.

Página WebLa página del Global IDP Survey incluye unabibliografía completa sobre los DI y puede acce-derse a ella en:http://www.sol.no/nrc-no/idp.htm

Si desea recibir las publicaciones del Global IDPSurvey y todavía no está en los listados de laRevista sobre Migraciones Forzosas, por favorpóngase en contacto con cualquiera de lassiguientes direcciones:

Global IDP SurveyChemin Moïse-Duboule 59

CH-1209 GinebraSuiza

Tel: +41 22 788 8085Fax: +41 22 788 8086

Correo electrónico: [email protected]

Global IDP Survey84 Sandfield RoadOxford OX3 7RL

Reino UnidoCorreo electrónico:

[email protected]

El Global IDP Survey comprende un programa deactividades, de las cuales la colaboración con laRevista sobre Migraciones Forzosas es una de ellas.Esta página de novedades aportará un informaciónregular sobre nuestro trabajo. Nos complace invitarlea ponerse en contacto con nosotros en la direcciónque aparece al final de la página.

El Global IDP Survey es un punto fundamental para la información yel activismo para la protección y asistencia a los desplazados inter-nos. El proyecto incluye:◆ Una base de datos mundial sobre los DI para uso de la comunidadhumanitaria;◆ La publicación de nuestro primer libro de referencias de contenidointegral -Internally Displaced People: A Global Survey- en junio de1998, que incluye cuestiones relativas a los DI por países y capítulostemáticos sobre cuestiones comunes a todos los países (disponiblegratis para los suscriptores de la RMF);◆ Una serie de perfiles de países que estudian las necesidades deprotección y asistencia de los DI;◆ Una serie de conferencias regionales para difundir nuestro trabajoy el de nuestros compañeros, incluido el de la oficina de FrancisDeng, el Representante Especial de NU para los DI;◆ La formación de un nuevo Consorcio para los DI de tres de lasagencias líderes que tratan cuestiones relativas al activismo y lainformación sobre DI (ver la sección de “Conferencias Regionales”).

En diciembre de 1997, el Global IDP Survey recibió el encargo porparte del Comité Permanente Inter-Agencias de NU para elaboraruna base de datos por países con cifras y un análisis descriptivo delas cuestiones relativas a los DI. Aunque realizado en estrecha cola-boración con la Oficina de Coordinación de Emergencias de NU,éste es un proyecto no gubernamental independiente. Un asesor haempezado un estudio de seis meses sobre su factibilidad y un ensayosobre el terreno de la base de datos. Si tiene éxito, el Global IDPSurvey albergará entonces la base de datos en sus oficinas deGinebra. Tendrá una vinculación directa con el público a través de laReliefWeb de NU.

El Global IDP Survey/Consejo Noruego para los Refugiados, elProyecto de la Institución Brookings sobre el Desplazamiento Interno(Washington, codirigida por Roberta Cohen y Francis Deng), y elComité de EE.UU. para los Refugiados han formado un nuevoConsorcio sobre los DI con el fin de coordinar las actividades y llevara cabo un trabajo conjunto en promoción e investigación en el futu-ro. En 1998, el Consorcio sobre los DI será responsable de una seriede conferencias regionales en Sudáfrica (junto con el CentroInternacional para la Investigación sobre el Desarrollo de Canadá),Asia, el Cuerno del África (junto con el ACNUR), Norteamérica y elReino Unido (junto con el Instituto Exterior para el Desarrollo). Lasconferencias tratarán las cuestiones relativas a la protección y asis-tencia internacionales y regionales.

Programade activi-dades

Base dedatos sobrelos DI

Conferenciasregionales

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MIGRACIONES FORZOSAS revista42 enero - abril 1998, 1

Boletín de suscripción para 1998DatosNombre ..................................................................................................................................................................................................

Nombre del cargo ............................................................Departamento ...............................................................................................

Organización..........................................................................................................................................................................................

Dirección................................................................................................................................................................................................

Ciudad .........................................................Código postal ...........................................País..................................................................

Tel ................................................................Fax ............................................................Correo electrónico ..........................................

La Revista sobre Migraciones Forzosas es la continuación de la revista RPN (Refugee Participation Network),red de comunicación sobre refugiados. Se publica 3 veces al año, desde 1998, en inglés, castellano y árabe.Se distribuye a más de 4.000 personas y organizaciones en 130 países.

Detalles de la suscripciónPor favor, complete las secciones 1, ó 2, segúnproceda.

1. Solicito una suscripción GRATUITA dentrode la siguiente categoría:

❏ vivo/trabajo en un país “en vías de desa-rrollo”

❏ estudiante/no asalariado

❏ refugiado/desplazado interno

❏ Trabajo/colaboro con una ONG

❏ Trabajo en un centro universitario/educa-tivo

❏ otros motivos (por favor, añada una carta con las

razones de su solicitud)

2. ❏ Ya no deseo estar suscrita/o a la Revistasobre Migraciones Forzosas.

• Instituciones: algunas instituciones de nuestra listareciben más de una copia. Por favor, tenga en cuenta lassiguientes opciones:

(i) Realizar una suscripción múltiple si tiene 2 o más per-sonas o delegaciones que se beneficiarían de recibir laRevista sobre Migraciones Forzosas. Indicar la direccióncompleta en una copia del formulario.

(ii) Realizar una suscripción por institución y designar a unmiembro del personal para que reciba y haga circular laRevista sobre Migraciones Forzosas. Por favor, tome enconsideración el hecho de que la suscripción pueda ir anombre de un cargo/departamento o de una persona.

Por favor, marque con una cruz los datos sobre su trabajo,actividad y temas de interés de cara a nuevos artículos parala revista en el futuro.

1. Organización:

2. Actividad:

3. Área geográfica de interés:

Gracias por el tiempo que ha empleado en rellenar este formulario.

Por favor, envíelo con urgencia a:Revista sobre Migraciones Forzosas

HEGOA, Facultad de Ciencias Económicas,Lehendakari Agirre 83, 48015 Bilbao, España.

Más información en: Tel: +34 4 944473512Fax: +34 4 944762653

Correo electrónico: [email protected]

❏ Agencia interguberna-mental AI

❏ Gobierno GO❏ Fundación FU❏ Biblioteca/centro de

documentación BI❏ Institución educativa IE

❏ Investigador/Profesoruniversitario IN

❏ Estudiante ES ❏ Periodista/medios de

comunicación PE❏ Refugiado RE ❏ ONG ON

❏ Educación ED❏ Desplazados internos DI❏ Generación de renta GR❏ Agricultura AG❏ Protección/Asilo PR❏ Desarrollo comunitario

DC❏ Desplazamiento medio-

ambiental DM

❏ Salud Mental SM❏ Mujeres y niños MN❏ Ayuda de emergencia AE❏ Administración de un

campo AC❏ Reasentamiento RE❏ Salud y nutrición SN❏ Desplazamiento por

causa del desarrollo DD

❏ África AF❏ Asia AS❏ Europa EU❏ Mundo entero ME

❏ Oriente Medio OM❏ Norteamérica NA❏ Pacífico PA❏ Latinoamérica/Caribe LA

Redes de contacto

hegoa

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Agradecimientos

MIGRACIONES FORZOSAS revista 43enero - abril 1998, 1

ECHO (Oficina Humanitaria de la Comunidad Europea)

ECHO gestiona la ayuda humanitaria de la Unión Europea. Parte de sumisión consiste en aumentar la concienciación de la opinión pública.ECHO financia la ayuda a las víctimas de las crisis que se producen fuerade la Unión Europea a través de las más de 170 organizaciones con las quetiene un Contrato Marco. ECHO es el mayor donante individual de ayuda humanitaria delmundo. ECHO financia bienes de primera necesidad, así como infraestructuras y programasde prevención y alerta.

La Revista sobre Migraciones Forzosas se financia principalmente con ayudas deinstituciones y agencias implicadas en desarrollo y trabajo humanitario. Nos gusta-ría agradecer a todos los donantes y en particular a las siguientes organizaciones suapoyo en 1998 en la edición inglesa y árabe:

❖ Fundación Al-Qattan ❖AUSTCARE/Consejo Australiano para la Ayuda al Extranjero

❖ Consejo Danés para los Refugiados ❖❖ Comisión Europea ❖

❖ Fundación Europea para los Derechos Humanos ❖❖ Federación Internacional de la Planificación Familiar ❖

❖ Federación Luterana Mundial ❖❖ Oxfam R.U. e Irlanda ❖

❖ Fondo Salvad a los Niños (R.U.) ❖❖ Fundación Ford, oficina El Cairo ❖

AgradecimientosLos números 1, 2 y 3 de la Revista sobre Migraciones

Forzosas, en su edición en castellano, está cofinanciadapor la DG IA (Derechos Humanos) de la Comisión Europea.Agradecemos su patrocinio, que hace posible la edición ydistribución durante 1998 a los paises de lengua castellana.

Agradecemos también a la DG IA y a la SECIPI (Secretaríade Estado para la Cooperación Internacional y para

Iberoamérica) por haber cofinanciado desde 1995 a 1997la edición, publicación y distribución de la revista RPN, en

su edición en castellano entre los nos 18 a 24. Con laRevista sobre Migraciones Forzosas, con este nº 1 que ini-

cia, se continúa con el trabajo iniciado hace ya cuatroaños con el RPN, en consorcio con el RSP de Oxford, yahora tambien con el Global IDP Survey de Noruega.

Deseamos poder continuar con el apoyo de las institucio-nes, donantes y suscriptores para difundir la revista.

★★★★★

★ ★ ★★★★

COMISION EUROPEADG IA

Agradecimiento a los donantes

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Este programa quiere contribuir a corregir las deficienciasy discrepancias entre las instituciones de investigación dela Unión Europea (UE) y América Latina (AL) en lo referen-te a conocimientos, experiencias y recursos en los estu-dios de migraciones forzosas. La Comisión Europea den-tro de su programa "Latin America Academic Training"(ALFA) financia la realización de tres encuentros de lasinstituciones que integran la red temática sobreMigraciones Forzosas en América Latina. Se trata de facili-tar el encuentro entre diferentes instituciones de Europa yde América Latina para que definan posibles líneas de tra-bajo conjunto tanto en proyectos de investigación comoen programas de intercambio de estudiantes de post-grado.

El Refugee Studies Programme (RSP) de la Universidad deOxford coordina el programa con la realización de tresencuentros, que se celebran en Bogotá, Lima y Oxford en1998. Junto al RSP, los miembros de la Red son:Universidad Nacional de Colombia (Colombia),Universidad de San Carlos (Guatemala), UniversidadFederal de Paraiba (Brasil), Grupo de DesarrolloTecnológico intermedio (Perú), Universidad de Deusto(España), Instituto Universitario HEGOA de la Universidaddel País Vasco (España), Universidad Autónoma deBarcelona (España), Centro para la investigación sobre elDesarrollo (Dinamarca), Colegio Trinitario de laUniversidad de Dublín (Irlanda). La red tiene composiciónmultidisciplinar, con la participación de diversos departa-mentos de las universidades miembros.

Como consecuencia de años de conflictos internos y deinjustos sistemas de tenencia de tierras, actualmente haymás de un millón de personas desplazadas internas (DI)en Brasil, Colombia, Guatemala y Perú. En estos cuatropaíses las DI continúan enfrentándose a riesgos de seguri-dad y retos socioeconómicos como consecuencia de susdesplazamientos. Esta red pretende contribuir a la inte-gración regional de personas desplazadas internamenteen Brasil, Colombia, Guatemala y Perú entendiendo lascausas y las consecuencias de las migraciones forzosas enesta región y en toda América Latina.

Objetivos de los 3 encuentros1. Acordar una línea de trabajo para establecer un progra-ma de movilidad de estudiantes postgraduados unido a lainvestigación referente a migraciones forzosas entre lasuniversidades miembros de la red en la UE y AL.

2. Discutir la colaboración en los proyectos de investiga-ción, incrementando el entendimiento y la política influ-yente en las causas y consecuencias de las migracionesforzosas.

El primer encuentro. Bogotá, marzo 16-19 de1998.Las jornadas de trabajo que se han desarrollado en Bogotáhan sido la primera toma de contacto entre las diferentesinstituciones de la red, por lo que han servido fundamen-talmente para conocerse, informar de las líneas de trabajode cada centro e iniciar un debate sobre el concepto deMigraciones Forzosas (MF) y las temáticas afines a él. En

los cuatro días que duró el encuentro se celebraron ochosesiones de trabajo.Sirvieron para las presentaciones delos distintos centros (sus áreas de trabajo y su experien-cia en el tema de las MF).

Se profundizó en el debate sobre los fenómenos que seincluyen dentro del concepto de Migraciones Forzosas,quedando consensuada una concepción amplia que inclu-ye migraciones por motivos de violencia política, pormotivos de desastres y por motivos económicos o dedesarrollo.

InvestigaciónEn lo referente a proyectos de investigación en colabora-ción, a partir de los debates realizados se han definidolos siguientes temas que pueden ser objeto de investiga-ción conjunta:

1) Las políticas institucionales respecto a las MF. Su rela-ción con la categorización y estigmatización de los fenó-menos de migración, y con los derechos fundamentalesde las personas migrantes.

2) Experiencia vital de desplazamiento o migración; lasestrategias para la reconstrucción socio-cultural delmodelo de vida. Género, identidad, grupo de edad... 3)Formas de prevención, intervención y evaluación en elfenómeno de las MF. 4) Los movimientos de población ysu relación con los Estados y el territorio. Propiedad, con-trol y uso de la tierra y el territorio. 5) Análisis compara-do de las MF en Colombia, Guatemala y Perú.

Intercambio de estudiantesEn lo referente al programa de intercambio de estudiantesde post-grado, la idea es ir definiendo un proyecto deintercambio que pueda ser presentado a la ComisiónEuropea o a otras instituciones para su financiación.

Incluiría temas de cooperación y asistencia humanitaria,estrategias de desarrollo, aspectos psicosociales, cultura yecología... En principio tendrán prioridad estudiantes queestén realizando un proyecto de tesis sobre migracionesforzosas.

Revista sobre Migraciones ForzosasEsta publicación puede servir como instrumento para dara conocer el trabajo que se realiza sobre este tema enAmérica Latina. Por tanto, las organizaciones, institucio-nes y personas interesadas pueden solicitar la suscripciónal elaborar y ampliar el nuevo directorio que se va a pre-parar en los próximos meses, incorporando el anterior deRPN. El directorio de inscripciones para la revista en cas-tellano se puede ampliar con los integrantes de tresredes:

- La red ALFA sobre Migraciones Forzosas. - La red sobre Desastres en América Latina. - La red ALFA de Salud Pública.

Para mayor información sobre la Red Alfa, contactar conel Refugee Studies Programme de la Universidad deOxford, como coordinador del programa. La persona decontacto es Seán Loughna. Tel.: +44-1867-270722. Fax:+44-1867-270721. Correo electrónico: [email protected]

Red ALFA sobre MigracionesForzosas en América Latinabajo el programa de la Comisión Europea "Formación Académica en América Latina " (ALFA)dentro de la política social y educacional.