restauración ecológica de áreas afectadas por

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Fernando Valladares Luis Balaguer Ignacio Mola Adrián Escudero Valentín Alfaya Restauración ecológica de áreas afectadas por infraestructuras de transporte Bases científicas para soluciones técnicas

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Page 1: Restauración ecológica de áreas afectadas por

Fernando Valladares

Luis Balaguer

Ignacio Mola

Adriaacuten Escudero

Valentiacuten Alfaya

Restauracioacuten ecoloacutegica de aacutereas afectadaspor infraestructuras de transporte

Vivimos en un mundo atravesado por carreteras liacuteneas de tren gasoductos y tendidos eleacutectricos Aunque nos hemos acostumbrado a ello los sistemas naturales no En este libro se revisan los impactos principales de la alteracioacuten ambiental que implica la creacioacuten y el uso de las infraestructuras lineales y se abordan los principales criterios cientiacutefi cos para reconducir y atenuar estos impactos Pero el libro no es solo un tratado cientiacutefi co sino que incluye ingredientes clave como los aspectos teacutecnicos y el marco legal para que sirva de referencia uacutetil y completa a quienes les interese la restauracioacuten ecoloacutegica de estos nuevos ecosistemas generados con la construccioacuten de infraestructuras lineales El libro busca estimular la interaccioacuten feacutertil entre cientiacutefi cos y teacutecnicos para abordar un tema ambiental legal social y econoacutemicamente complejo como es el de queacute ocurre y queacute conviene hacer con las aacutereas afectadas por estas infraestructuras Para contribuir a esta interaccioacuten el libro reuacutene el trabajo y la experiencia de maacutes de treinta expertos y recopila la informacioacuten de numerosos proyectos tanto de investigacioacuten como de construccioacuten y de restauracioacuten aportando una seleccioacuten clave de referencias bibliograacutefi cas y recursos disponibles en internet

Fortuny 7 28010 MadridT 91 121 09 2o F 91 121 09 31biodiversidadfundacion-biodiversidadeswwwfundacion-biodiversidades

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Los editores de este libro auacutenan experiencias profesionales complementarias incluso contrastadas ya que mientras tres de ellos provienen del aacutembito acadeacutemico los otros dos realizan su trabajo en el seno de empresas privadas Los cinco comparten el intereacutes por el impacto de las infraestructuras lineales sobre el medio natural y llevan muchos antildeos recopilando informacioacuten y participando en diversos proyectos con el fi n de comprender mejor estos impactos y como atenuarlos Las ideas teoacutericas desde el campo de la ecologiacutea que Fernando Valladares Luis Balaguer y Adriaacuten Escudero han ido destilando como resultado de su investigacioacuten han debido combinarse por un lado con el conocimiento de la realidad a pie de obra que Valentiacuten Alfaya ha acumulado durante el seguimiento de numerosos proyectos de construccioacuten y por otro con la experiencia de Ignacio Mola quien auacutena ambos intereses cientiacutefi cos y de empresa como coordinador de proyectos en restauracioacuten de I+D+i en el aacutembito de la construccioacuten y explotacioacuten de infraestructuras La necesidad de combinar visiones y experiencias les ha llevado a colaborar con frecuencia y el resultado de ese cruce feacutertil entre la ciencia y la teacutecnica entre el mundo de las ideas y el marco tozudo de una realidad compleja es lo que ha dado origen a este libro

Restauracioacuten ecoloacutegica de aacutereas afectadas

por infraestructuras de transporte

Bases cientiacutefi cas para soluciones teacutecnicas

Fernando Valladares

Luis Balaguer

Ignacio Mola

Adriaacuten Escudero

Valentiacuten Alfaya

Restauracioacuten ecoloacutegica de aacutereas afectadaspor infraestructuras de transporte

Vivimos en un mundo atravesado por carreteras liacuteneas de tren gasoductos y tendidos eleacutectricos Aunque nos hemos acostumbrado a ello los sistemas naturales no En este libro se revisan los impactos principales de la alteracioacuten ambiental que implica la creacioacuten y el uso de las infraestructuras lineales y se abordan los principales criterios cientiacutefi cos para reconducir y atenuar estos impactos Pero el libro no es solo un tratado cientiacutefi co sino que incluye ingredientes clave como los aspectos teacutecnicos y el marco legal para que sirva de referencia uacutetil y completa a quienes les interese la restauracioacuten ecoloacutegica de estos nuevos ecosistemas generados con la construccioacuten de infraestructuras lineales El libro busca estimular la interaccioacuten feacutertil entre cientiacutefi cos y teacutecnicos para abordar un tema ambiental legal social y econoacutemicamente complejo como es el de queacute ocurre y queacute conviene hacer con las aacutereas afectadas por estas infraestructuras Para contribuir a esta interaccioacuten el libro reuacutene el trabajo y la experiencia de maacutes de treinta expertos y recopila la informacioacuten de numerosos proyectos tanto de investigacioacuten como de construccioacuten y de restauracioacuten aportando una seleccioacuten clave de referencias bibliograacutefi cas y recursos disponibles en internet

Fortuny 7 28010 MadridT 91 121 09 2o F 91 121 09 31biodiversidadfundacion-biodiversidadeswwwfundacion-biodiversidades

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Los editores de este libro auacutenan experiencias profesionales complementarias incluso contrastadas ya que mientras tres de ellos provienen del aacutembito acadeacutemico los otros dos realizan su trabajo en el seno de empresas privadas Los cinco comparten el intereacutes por el impacto de las infraestructuras lineales sobre el medio natural y llevan muchos antildeos recopilando informacioacuten y participando en diversos proyectos con el fi n de comprender mejor estos impactos y como atenuarlos Las ideas teoacutericas desde el campo de la ecologiacutea que Fernando Valladares Luis Balaguer y Adriaacuten Escudero han ido destilando como resultado de su investigacioacuten han debido combinarse por un lado con el conocimiento de la realidad a pie de obra que Valentiacuten Alfaya ha acumulado durante el seguimiento de numerosos proyectos de construccioacuten y por otro con la experiencia de Ignacio Mola quien auacutena ambos intereses cientiacutefi cos y de empresa como coordinador de proyectos en restauracioacuten de I+D+i en el aacutembito de la construccioacuten y explotacioacuten de infraestructuras La necesidad de combinar visiones y experiencias les ha llevado a colaborar con frecuencia y el resultado de ese cruce feacutertil entre la ciencia y la teacutecnica entre el mundo de las ideas y el marco tozudo de una realidad compleja es lo que ha dado origen a este libro

Restauracioacuten ecoloacutegica de aacutereas afectadas

por infraestructuras de transporte

Bases cientiacutefi cas para soluciones teacutecnicas

Restauracioacuten ecoloacutegica de aacutereas afectadaspor infraestructuras de transporte

Fernando Valladares | Luis Balaguer | Ignacio Mola

Adriaacuten Escudero | Valentiacuten Alfaya

Bases cientiacuteficas para soluciones teacutecnicas

Proacutelogos 7

Agradecimientos 11

1 Restauracioacuten ecoloacutegica e infraestructuras de transporte definiciones problemas y desafiacuteosLuis Balaguer Fernando Valladares e Ignacio Mola 15

2 Consideraciones geomorfoloacutegicas e hidroloacutegicasJoseacute F Martiacuten Duque Saturnino de Alba y Fernando Barbero Abolafio 43

3 Ecohidrologiacutea erosioacuten hiacutedrica y dinaacutemica de la vegetacioacuten en laderas artificialesJoseacute Manuel Nicolau Tiscar Espigares Mariano Moreno de las Heras y Luis Merino-Martiacuten 75

4 Importancia del suelo para la restauracioacuten de la cubierta vegetalPablo Garciacutea-Palacios 85

5 Procesos ecoloacutegicos y restauracioacuten de la cubierta vegetalEsther Bochet Pablo Garciacutea-Palacios Begontildea Peco Jaume Tormo y Patricio Garciacutea-Fayos 101

6 Introduccioacuten de especies lentildeosasPedro Villar-Salvador Santiago Soliveres y Joseacute Luis Quero 143

7 Ecotecnologiacutea aplicada a la restauracioacuten de infraestructuras de transporteSantiago Soliveres Valentiacuten Contreras Joatildeo Paulo Fernandes Jordi Cortina Pablo Garciacutea-Palacios Marisa Martiacutenez y Jorge Fort 177

8 Actuaciones para minimizar los efectos sobre la faunaJuan E Malo y Cristina Mata 213

9 Seguimiento y vigilancia ambientalCarlos Iglesias Santiago Soliveres Valentiacuten Alfaya Je-suacutes Aacutelvarez Ignacio Mola Javier Martiacutenez de Castilla y Xavier Artigas 243

10 LegislacioacutenCarlos Iglesias Luis Balaguer Ignacio Mola y Valentiacuten Alfaya 275

11 Restauracioacuten ecoloacutegica e infraestructuras de transporte perspectivas y recomendacionesLuis Balaguer Fernando Valladares Adriaacuten Escudero Ignacio Mola y Valentiacuten Alfaya 303

Anexo 1 Fuentes recomendadas de informacioacuten adicional 311

Anexo 2 Sobre los autores y revisores del libro 317

Restauracioacuten ecoloacutegica de aacutereas afectadas por infraestructuras de transporte Bases cientiacuteficas para soluciones teacutecnicas

Publicado por

Fundacioacuten Biodiversidad

Editores

Fernando Valladares Luis Balaguer Ignacio Mola Adriaacuten Escudero y Valentiacuten Alfaya

Esta publicacioacuten ha sido posible gracias a la colaboracioacuten de

Ferrovial S A Priacutencipe de Vergara 135 - 28002 Madrid (Espantildea) Tel (+34) 91 586 25 00 wwwferrovialcom

Obrascoacuten Huarte Laiacuten S A Torre Espacio Paseo de la Castellana 259D - 28046 Madrid (Espantildea) Tel (+34) 91 348 41 00 wwwohles

Disentildeo maquetacioacuten e impresioacuten

AGSM Artes Graacuteficas wwwagsmartesgraficases

Depoacutesito Legal AB-338-2011

Fotografiacuteas las fotografiacuteas que aparecen en este libro son propiedad exclusiva de sus autores En caso de no sentildealarse expliacutecitamente su autoriacutea pertenecen a los autores del capiacutetulo correspondiente

Cita recomendada

Valladares F Balaguer L Mola I Escudero A y Alfaya V eds 2011 Restauracioacuten ecoloacutegica de aacutereas afectadas por infraestructuras de transporte Bases cientiacuteficas para soluciones teacutecnicas Fundacioacuten Biodiversidad Madrid Espantildea copyFundacioacuten Biodiversidad 2011

Impreso en papel certificado FSCreg

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PROacuteLO

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Teresa Ribera RodriacuteguezSecretaria de Estado de Cambio ClimaacuteticoVicepresidenta de la Fundacioacuten Biodiversidad

La conservacioacuten de la ldquodiversidad de la vidardquo como define la biodiversidad el Convenio sobre Diversidad Bioloacutegica se ha revelado como un componente cla-ve del desarrollo sostenible Del buen funcionamien-to de los ecosistemas depende el futuro econoacutemico social y cultural del paiacutes Sin embargo las presiones que amenazan esta diversidad son numerosas Entre otros factores el aumento de infraestructuras linea-les de transporte ha sido identificado como uno de los motivos de peacuterdida de biodiversidad relevantes en la actualidad

Las infraestructuras viarias son el escenario en el que cada diacutea se desenvuelven millones de perso-nas La superficie que ocupan en Espantildea ha tenido un ritmo de crecimiento exponencial en las uacuteltimas deacutecadas suponiendo en la actualidad alrededor de 1 del territorio El avance que estas suponen en teacuterminos de movilidad y de impulso econoacutemico debe ir acompantildeado de una evaluacioacuten ambiental para co-nocer sus consecuencias sobre el patrimonio natural y la biodiversidad y de esta forma buscar foacutermulas que permitan minimizar sus impactos tal como estaacute previsto por la legislacioacuten de evaluacioacuten ambiental

Desde el Ministerio de Medio Ambiente y Medio Rural y Marino trabajamos para preservar el buen estado de los ecosistemas y para restaurar su fun-cionalidad como viacutea para mantener los importantes servicios que prestan a la sociedad Por ello somos conscientes de la importancia de seguir avanzando

en la integracioacuten de las poliacuteticas sectoriales en este caso las poliacuteticas de movilidad y transporte con las poliacuteticas ambientales Es un reto que nos compete a todas las administraciones y cuyas exigencias baacute-sicas nos marca la ley 422007 de 13 de diciembre del Patrimonio Natural y de la Biodiversidad y la legislacioacuten vigente sobre evaluacioacuten ambiental

Por ello a traveacutes de la Fundacioacuten Biodiversidad y desde el 2006 se ha trabajado en colaboracioacuten con el Consejo Superior de Investigaciones Cientiacuteficas la Universidad Rey Juan Carlos y Cintra para desarro-llar el proyecto EXPERTAL ldquoElaboracioacuten de las bases experimentales para la sostenibilidad ecoloacutegica de los taludes de autopistasrdquo El objetivo ha sido esta-blecer las bases ecoloacutegicas que regulan el desarro-llo de las comunidades vegetales en los taludes de carreteras y autopistas en las distintas condiciones ambientales de la Peniacutensula Ibeacuterica

Este libro recoge las conclusiones de este estudio Aunque se ha querido ir maacutes allaacute para ofrecer un texto completo que recopile y sintetice los trabajos de otros grupos de investigacioacuten Desde estas liacuteneas queremos agradecer a todos los que han intervenido su valiosa aportacioacuten Estamos convencidos de que serviraacute para disentildear ejecutar y mantener los taludes de las infraestructuras lineales de transporte de una manera maacutes eficiente Como bien concluye el libro el futuro pasa por tener infraestructuras maacutes sostenibles y mejor integradas en el entorno que les rodea

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Luis Garciacutea-Linares GarciacuteaDirector General Corporativo del Grupo OHL

Supone para miacute un placer presentar este libro que creo que viene a cubrir una carencia en la literatura divul-gativa y teacutecnica en restauracioacuten de espacios afectados por la construccioacuten de infraestructuras Me gustariacutea por ello agradecer en primer lugar a la Fundacioacuten Biodiver-sidad la oportunidad brindada para hacerlo realidad

Se trata esta de una disciplina joven pero a la que se intuye una creciente relevancia si consideramos algunos de los datos que se exponen de forma rigu-rosa a lo largo de estas paacuteginas Asiacute aspectos como el porcentaje que suponen en los paiacuteses desarrolla-dos los espacios afectados por las infraestructuras sobre el total de su superficie o el volumen de mo-vimiento de tierra que generan en su construccioacuten comparado con los producidos por los fenoacutemenos geoloacutegicos tradicionales invitan a dejar de pensar en ellos como meras superficies marginales Todo ello unido a la singularidad de los ecosistemas ge-nerados con estas actuaciones ofrece una nueva perspectiva acerca de la importancia que supone para nuestras sociedades ampliar el conocimiento sobre estas materias y acerca de la responsabilidad con que deben actuar todos los agentes implicados

Consciente de esta realidad el Grupo OHL especializa-do en construccioacuten y explotacioacuten de infraestructuras a nivel internacional lleva implicado activamente desde 2003 en la I+D relacionada con la integracioacuten ambiental y la reduccioacuten del impacto de esta enfocada a identifi-car y desarrollar las medidas y teacutecnicas maacutes adecuadas y con menores incertidumbres en su resultado

Para recorrer este camino en OHL hemos tenido el privilegio de establecer una colaboracioacuten continua-da con el prestigioso equipo de investigacioacuten del Dr Luis Balaguer de la Universidad Complutense de Madrid que tambieacuten ha participado activamente en la preparacioacuten de este libro que el lector tiene entre sus manos Tras maacutes de 8 antildeos abordando proyec-tos en comuacuten se ha logrado cristalizar un equipo mixto de investigacioacuten integrado por profesionales de la universidad y de la empresa que rompe el toacute-pico de la falta de comunicacioacuten entre ambos mun-dos Esta colaboracioacuten nos ha permitido optimizar el retorno de los trabajos de I+D+i en forma de experiencia y resultados aplicados progresivamen-te en nuestras liacuteneas de produccioacuten (construccioacuten y explotacioacuten)

Hasta el momento la liacutenea de investigacioacuten indus-trial en restauracioacuten de espacios afectados por la construccioacuten de infraestructuras de OHL ha dado lugar a dos proyectos finalizados otros tantos en curso y alguno maacutes en fase de lanzamiento Se tra-ta de una liacutenea asentada exitosa y con proyeccioacuten internacional que ha aportado a este libro algunos resultados relevantes

Por uacuteltimo me gustariacutea felicitar y agradecer sus aportaciones a todos los autores que han traslada-do su conocimiento y experiencia a estas paacuteginas que estoy seguro supondraacuten una valiosa referencia teacutecnica y cientiacutefica en el futuro de esta incipiente y ciertamente relevante disciplina

Iacutentildeigo Meiraacutes Amusco Consejero Delegado de Ferrovial

En tiempos las carreteras se construiacutean adaptaacutendo-se a la topografiacutea del terreno respetando las curvas de nivel de los accidentes geograacuteficos que atrave-saban De esta manera el trazado se adecuaba al relieve y en cierto sentido al paisaje circundante minimizando el impacto medioambiental de estas infraestructuras Actualmente las nuevas autopistas y ferrocarriles suponen indiscutibles mejoras para la calidad de vida poblaciones antes lejanas se han aproximado en la misma medida en que se ha incre-mentado la velocidad de los vehiacuteculos que circulan por nuestras infraestructuras mejorando ademaacutes la seguridad para los usuarios y para los habitantes de la zona Pero al mismo tiempo los trazados se han hecho maacutes exigentes implicando en ocasiones ingentes movimientos de tierras que conllevan la al-teracioacuten de los ecosistemas que se asentaban en el entorno de la nueva infraestructura

La mitigacioacuten de este impacto pasa como es sabido por la restauracioacuten de los ecosistemas dantildeados si no en su integridad siacute en una medida suficiente como para recuperar una gran parte de su valor en teacuterminos ecoloacutegicos funcionales y por queacute no tambieacuten cultu-rales Por ello todos los agentes que intervenimos di-rectamente en la planificacioacuten disentildeo y construccioacuten de estas infraestructuras estamos obligados a encon-trar soluciones cada vez maacutes eficientes para restaurar el medio natural afectado por las obras

Hace casi dos deacutecadas el profesor Jourdain se pre-guntaba ldquoiquestPor queacute querer imponer una cubierta ve-getal proyeccioacuten de nuestra imaginacioacuten sobre un

terreno para el que la Naturaleza tiene ya su propio proyectordquo En Ferrovial una de las mayores empresas de infraestructuras del mundo estamos convencidos de que el disentildeo de mejores medidas de restauracioacuten ambiental pasa sin duda por entender queacute hace la propia naturaleza para reconstruir los sistemas afecta-dos por un impacto de estas caracteriacutesticas Con toda seguridad los proyectos de restauracioacuten maacutes eficien-tes teacutecnica y econoacutemicamente seraacuten aquellos que en cierta medida ayuden a la naturaleza a recuperarse por siacute misma sacando el maacuteximo partido a los pro-cesos ecoloacutegicos que operan en estas circunstancias

Para avanzar en este conocimiento desde hace casi diez antildeos trabajamos con instituciones como el Con-sejo Superior de Investigaciones Cientiacuteficas la Univer-sidad Complutense la Universidad Rey Juan Carlos de Madrid y maacutes recientemente la Fundacioacuten Biodiversi-dad El manual que usted tiene ahora en sus manos re-coge los resultados de investigacioacuten generados por di-versos grupos de investigadores en todos estos antildeos Los avances se han concretado en diversas soluciones teacutecnicas que gestores e ingenieros podraacuten aplicar en futuros proyectos de restauracioacuten ambiental teacutecnica y econoacutemicamente maacutes eficientes que los actuales

En Ferrovial esperamos que este innovador texto contribuya a sentar las bases de lo que los cientiacutefi-cos han dado en llamar ldquorestauracioacuten ecoloacutegicardquo y que en definitiva no es sino actuar con maacutes inte-ligencia y eficiencia aprendiendo de la naturaleza para facilitar la integracioacuten ecoloacutegica de las infraes-tructuras de transporte del futuro

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AGRADECIMIENTOS lo que ha hecho posible este libro

Este libro es una labor colectiva en el maacutes amplio sentido No solo por reunir a maacutes de 30 especialistas que han acabado como coautores del mismo sino por conseguir la participacioacuten de representantes de los colectivos maacutes diversos cientiacuteficos profesores estudiantes de doctorado teacutecnicos de la adminis-tracioacuten responsables de empresas de construccioacuten e infraestructuras teacutecnicos en restauracioacuten y pro-duccioacuten forestal autoridades en el mundo de la legislacioacuten ambiental y en planes de seguimiento etc Combinar opiniones informacioacuten y experiencia de autores tan dispares ha sido todo un reto pero tambieacuten un punto de partida en esta aventura de cuya experiencia hemos salido todos enriquecidos Durante el antildeo de gestacioacuten de este libro hemos sufrido numerosos desafiacuteos personales para com-patibilizar este esfuerzo con nuestras obligaciones habituales Por suerte pudimos con todo y creemos con honestidad que el resultado habla por siacute mis-mo Estamos convencidos de que nuestro trabajo marca un hito que sentaraacute precedente al conseguir reunir a los principales agentes implicados en este complejo mundo de la restauracioacuten ecoloacutegica Con-fiamos en que sea una aportacioacuten uacutetil para andar el largo camino que deberiacutean recorrer necesariamente de la mano los diversos agentes econoacutemicos ins-tituciones y expertos implicados en la integracioacuten ambiental de las infraestructuras de transporte y en la restauracioacuten de las aacutereas afectadas por estas La relacioacuten detallada de agradecimientos de una obra asiacute seriacutea muy larga y seguro que siempre incomple-ta recogemos a continuacioacuten los principales hitos y apoyos que hicieron este libro posible y pedimos disculpas por las omisiones en que podamos incurrir

La Fundacioacuten Biodiversidad se brindoacute desde un prin-cipio a correr con los gastos de la impresioacuten del libro dando por tanto ese necesario soporte para cristalizar un proyecto que veniacuteamos acariciando desde haciacutea mucho tiempo El apoyo de Ignacio To-rres y el buen hacer de Raquel Palomeque han sido esenciales en este sentido Queremos manifestar de forma expliacutecita el enorme apoyo de dos grupos de empresas del mundo de la construccioacuten y las infra-estructuras el grupo Ferrovial y el grupo OHL que han alentado la necesidad de que todos los agentes nos reunamos alrededor de una mesa para hacer posible esta obra y que han apoyado las iniciativas cientiacuteficas que han precedido a este libro Dentro de estas se cuentan un buen nuacutemero de proyectos de investigacioacuten como TALMED (Bases ecoloacutegicas para la restauracioacuten de taludes en aacutereas de clima medite-rraacuteneo TALMED REN 2001-2313) proyecto financia-do por el Ministerio de Ciencia y Tecnologiacutea (actual-mente Ministerio de Ciencia e Innovacioacuten) en 2001 y Ferrovial y que sirvioacute de arranque para muchas de las ideas que aquiacute han cristalizado A TALMED le han seguido muchos otros entre los que destacan EX-PERTAL (Bases experimentales para la sostenibilidad ecoloacutegica de los taludes de autopistas) resultado de un convenio entre el CSIC la Universidad Rey Juan Carlos (Madrid) CINTRA y la Fundacioacuten Bio-diversidad durante los antildeos 2006 y 2010 Por su parte OHL ha realizado otros tantos proyectos de investigacioacuten entre los que podemos destacar los ya finalizados como HIDROTAL (Desarrollo de crite-rios y meacutetodos para evaluar el eacutexito de la restaura-cioacuten de taludes mediante hidrosiembra) que contoacute con ayudas del Ministerio de Ciencia e Innovacioacuten

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IacuteNDICE

(PROFIT FIT-050000-2003-36 FIT-310200-2004-101 CIT-310200-2005-100) y del Centro para el Desarrollo Tecnoloacutegico e Industrial (CDTI OHL-04-0391) reali-zado entre 2003 y 2006 o RECOTAL (Restauracioacuten ecoloacutegica de espacios afectados por la construccioacuten de infraestructuras) que tambieacuten contoacute con ayu-das de los citados organismos (PROFIT CIT-310200-2007-24 CDTI IDI-20080334) durante el periodo 2007-2008 Ambos proyectos llegaron a buen puerto gracias a la imprescindible colaboracioacuten de Univer-sidad Complutense de Madrid Maacutes recientemente la red REMEDINAL2 (lsquoRestauracioacuten y conservacioacuten de los ecosistemas madrilentildeos Respuesta frente al cambio globalrsquo S2009AMB-1783) de la Comunidad de Madrid ha permitido maximizar las interacciones

cientiacuteficas entre distintos grupos cientiacuteficos y empre-sas con sede en Madrid favoreciendo las circunstan-cias que han conducido a este libro

El libro se ha beneficiado de la informacioacuten graacutefica disponible por editores y autores Ademaacutes de las numerosas figuras y fotografiacuteas que se han apor-tado para ilustrar las ideas expresadas en el texto el libro ha incorporado una coleccioacuten de las me-jores imaacutegenes del fondo documental de Ferrovial y del grupo de fauna de la Universidad Autoacutenoma de Madrid asiacute como los aportes de autores indi-viduales como Ignacio Mola Joseacute Francisco Martiacuten Duque Marisa Martiacutenez Santiago Soliveres y Pa-blo Garciacutea Palacios

Fernando Valladares Luis Balaguer Ignacio Mola Adriaacuten Escudero y Valentiacuten Alfaya

Restauracioacuten ecoloacutegica e infraestructuras de transporte definiciones problemas y desafiacuteos

Luis Balaguer Fernando Valladares e Ignacio Mola

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I EL CONCEPTO DE RESTAURACIOacuteN ECOLOacuteGICA EN EL CONTEXTO DE LA OBRA CIVIL

1 Teacuterminos y conceptos

En el contexto de la obra civil han proliferado diversos teacuterminos para describir el tratamiento de los espacios afectados por la construccioacuten de infraestructuras El enunciado maacutes difuso es el de ordenacioacuten ecoloacutegica esteacutetica y paisajiacutestica en el que no se identifican obje-tivos sino uacutenicamente el aacutembito de las acciones pro-puestas Esta foacutermula suma a su escasa definicioacuten el caraacutecter fragmentario de la enumeracioacuten de teacuterminos al no conseguir integrar en una sola estrategia discipli-nas que deberiacutean converger en el entorno de la obra civil Maacutes concreto pero igualmente poco comprome-tido es el teacutermino revegetacioacuten entendida como el establecimiento de un tapiz o cubierta vegetal En el otro extremo de ambicioacuten se encontrariacutea el tiacutetulo de numerosos proyectos que comienzan con expresiones como recuperacioacuten del medio natural Recuperacioacuten es un teacutermino engantildeoso porque sugiere la reversibi-lidad de las acciones ejecutadas Lamentablemente el tiempo transcurre en un solo sentido y solo excepcio-nalmente es posible reconstruir o reponer el mosaico de ecosistemas inicial Medio natural es igualmente desafortunado Muchos de los paisajes considerados como paradigmaacuteticos de lsquonaturaleza bien conservadarsquo son el resultado de la interaccioacuten secular o milena-ria del hombre con su entorno encinares castantildeares choperas carrizales praderas etc Es esta interaccioacuten la que confiere singularidad a algunos de los espacios

CAPIacuteTULO 1 Restauracioacuten ecoloacutegica e infraestructuras de transporte definiciones problemas y desafiacuteos

Luis Balaguer Fernando Valladares e Ignacio Mola

naturales protegidos de este territorio Por uacuteltimo es erroacuteneo posicionar al ser humano y a sus actividades al margen de lo lsquonaturalrsquo en el campo de lo lsquoartificialrsquo

De modo general el proyecto para el tratamiento de los espacios afectados por las obras se articu-la en torno a los potenciales impactos ambientales Desde los Reales Decretos 13021986 y 11311988 se establece que los estudios de evaluacioacuten de im-pacto ambiental deben proponer las actuaciones ne-cesarias para evitar reducir o compensar los efectos ambientales negativos significativos Estas acciones reciben el nombre de medidas protectoras (o preven-tivas) correctoras y compensatorias respectivamen-te La Ley 12008 de Evaluacioacuten de Impacto Ambien-tal sumada a sus homoacutelogas autonoacutemicas extiende el dominio de aplicacioacuten de estas definiciones en el aacutembito de las infraestructuras lineales

La Ley 82001 de Carreteras de Andaluciacutea propone dos teacuterminos integracioacuten ambiental y restauracioacuten paisajiacutestica La intencioacuten es establecer una diferen-cia entre la ejecucioacuten de las medidas preventivas y correctoras establecidas en la declaracioacuten de im-pacto ambiental (integracioacuten ambiental) de aquellas otras adicionales que persigan con mayor rigor y detalle la revegetacioacuten del dominio puacuteblico viario y del entorno afectado para su mejor integracioacuten en el paisaje local (restauracioacuten paisajiacutestica)

Es probable que expresiones como recuperacioacuten del medio natural o restauracioacuten paisajiacutestica respondan a una demanda social de conservacioacuten del patrimonio de la biodiversidad y del paisaje pero sobre todo de

mejora de la calidad de vida del usuario y de los resi-dentes en zonas proacuteximas a la infraestructura En esta coyuntura aparece procedente de otro aacutembito una nueva visioacuten la de la restauracioacuten ecoloacutegica

2 Una nueva visioacuten

La restauracioacuten ecoloacutegica entendida como la colabo-racioacuten al desarrollo de un determinado mosaico de co-munidades de organismos con el fin de mejorar la ca-lidad integral de los ecosistemas y su expresioacuten como paisaje constituye una herramienta primordial dentro de los planes de conservacioacuten y gestioacuten de especies y espacios El teacutermino restauracioacuten integra los dos objetivos que persiguen las actuaciones a) orientar el dinamismo espontaacuteneo del sistema hacia un de-terminado mosaico de comunidades de organismos y b) acelerar el proceso que espontaacuteneamente habriacutea tardado en suceder un tiempo maacutes dilatado o no ha-briacutea ocurrido por siacute mismo El epiacuteteto ecoloacutegica hace referencia a los criterios y meacutetodos utilizados por el restaurador El disentildeo de protocolos para la recupera-cioacuten de poblaciones comunidades y haacutebitats supone un reto tanto cientiacutefico como teacutecnico En el aacutembito cientiacutefico el desarrollo de contenidos que sustenten el concepto y la praxis de la restauracioacuten ha generado una nueva siacutentesis de la teoriacutea ecoloacutegica basada en la reflexioacuten sobre la dimensioacuten del impacto antropo-geacutenico en el planeta El intento de reunir las piezas del puzle ensamblarlas y que el conjunto funcione de una determinada forma plantea hipoacutetesis relevantes sobre la ecologiacutea y evolucioacuten de los organismos y sistemas (Figura 1)

Figura 1 La cobertura vegetal de este terrapleacuten generado durante la construccioacuten de una autopista no se debe al eacutexito de la hidrosiembra realizada ya que las especies presentes no estaban incluidas en el coctel de semillas aplicado sino a la germinacioacuten espontaacutenea de espe-cies anuales que alcanzaron este escenario mediante dos posibles viacuteas bien por dispersioacuten natural desde el entorno (matriz) bien al estar incluidas sus semillas en el extendido de tierra vegetal que se realizoacute de forma previa a la ejecucioacuten de la hidrosiembra (Foto Ignacio Mola)

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Las primeras propuestas teacutecnicas implicaban costes ecoloacutegicos y econoacutemicos inaceptables beneficios fugaces o se basaban en concepciones erroacuteneas Estas deficiencias se han visto agravadas por la aplicacioacuten de teacutecnicas y criterios agronoacutemicos in-apropiados en el marco de la restauracioacuten ecoloacutegi-ca La influencia de estos criterios auacuten se manifiesta en numerosos proyectos de obra que persiguen la integracioacuten paisajiacutestica de aacutereas degradadas pero recomiendan el aporte de nutrientes el extendido de una gruesa capa de sustrato feacutertil y la evalua-cioacuten del eacutexito de las siembras atendiendo a valores de cobertura sin que en ninguno de estos casos se contemplen como referente las caracteriacutesticas de la matriz circundante no alterada Los planteamien-tos basados en una filosofiacutea agronoacutemica tienen un espacio restringido pero de enorme intereacutes en el contexto de la restauracioacuten La restauracioacuten de am-plias superficies frecuentemente conlleva el reto de generar mosaicos en los que se integren paisajes agrarios que supongan la disponibilidad de nuevos recursos para las poblaciones humanas afectadas o constituyan por siacute mismos un patrimonio natural por su alta diversidad bioloacutegica o cultural como resultado secular de una interaccioacuten sostenible del hombre con su medio En el aacutembito de la obra civil los protocolos de inspiracioacuten agronoacutemica se han justificado aludiendo a que el objetivo prioritario de la revegetacioacuten es la estabilizacioacuten del sustrato de los taludes generados por la construccioacuten de infraestructuras Por ello se seleccionan y siembran linajes de especies de germinacioacuten y crecimiento raacutepido se abona y se riega Este planteamiento teoacuterico que vincula las praacutecticas de inspiracioacuten agronoacutemica con la estabilidad geoteacutecnica contrasta con la realidad en obra De hecho los taludes se siembran semanas o meses despueacutes de haberse abierto (Figura 2) los dientes de los cazos de las retroexcavadoras abren canales que evolucionan en regueros y caacutercavas y sobre todo la erosioacuten superficial podriacutea paliarse con una red de drenaje adecuada y un acabado maacutes estable

Frente a estos planteamientos agronoacutemicos el cambio cualitativo en el disentildeo de paisajes en el contexto de la restauracioacuten ha sido el compren-der que el objetivo no es reunir una coleccioacuten de

elementos caracteriacutesticos para recrear un paisaje sino operar sobre variables ecoloacutegicas clave de for-ma que se inicie y acelere un proceso espontaacuteneo de cicatrizacioacuten Maacutes que en la recuperacioacuten de la composicioacuten la atencioacuten se debe centrar en la re-paracioacuten de procesos como la hidrologiacutea el ciclo de nutrientes o la captacioacuten de energiacutea El nuevo paradigma de la restauracioacuten basa las estrategias de actuacioacuten en una intervencioacuten miacutenima sobre los procesos autogeacutenicos del sistema Por ello estas actuaciones deben representar un coste econoacutemico reducido y ser efectivas en vastas superficies lo cual es apropiado cuando el objetivo que se persi-gue es el establecimiento de una cubierta vegetal de escaso o nulo mantenimiento soporte de un uso muacuteltiple que pueda incluir desde la conserva-cioacuten de la diversidad bioloacutegica hasta la explotacioacuten agropecuaria y forestal o el turismo

Figura 2 Aspecto de los taludes de un desmonte de la autoviacutea M-12 diacuteas antes de proceder a su hidrosiembra Se observan los canales generados por los dientes de los cazos de las retroexcavadoras que han sido ampliados por erosioacuten generando regueros y pequentildeos desprendimientos (Foto Ignacio Mola)

II EL ENTORNO DE LAS INFRAESTRUCTURAS DE TRANSPORTE

Todas las obras civiles denominadas infraestructuras lineales entre las que destacan las infraestructuras de transporte comparten el hecho de que una de sus dimensiones la longitud predomina sobre las otras dos lo cual tiene estas dos importantes im-plicaciones

1 Generan corredores con su doble accioacuten como conectores y barreras

2 Atraviesan una elevada variedad de medios lo que a su vez conlleva

bull Gran diversidad de normas aplicables (leyes de aguas costas montes conservacioacuten de la naturaleza etc)

bull Numerosas expropiaciones con los consi-guientes cambios de uso

bull Disentildeos complejos dado que deben respon-der a una importante variacioacuten del entorno

El resultado de las obras genera un nuevo escenario en el que la restauracioacuten ecoloacutegica en general y la reve-getacioacuten en particular deben contribuir a resolver tam-bieacuten cuestiones relacionadas con el funcionamiento de la infraestructura En el caso de carreteras por ejem-plo se trata de evitar deslumbramientos y la hipnosis del conductor y la reduccioacuten del peligro marginal

En el caso de las infraestructuras de transporte los condicionantes teacutecnicos obligan a realizar impor-tantes movimientos de tierra (Figura 3) El volumen y destino de dichos movimientos depende de la

diferencia de cota entre la rasante de la viacutea y la topografiacutea y la pendiente de los taludes con que se disentildee la seccioacuten tipo de la infraestructura En caso de que la rasante se encuentre a una cota superior a la del terreno seraacute necesario efectuar un relleno con materiales de aportacioacuten que se denomina terra-pleacuten Por el contrario se denomina desmonte cuan-do es necesario excavar para realizar la explanacioacuten de la infraestructura porque la rasante se situacutea por debajo de la cota del nivel natural del terreno (Figu-ra 4) Las superficies inclinadas que resultan a lo lar-go de un terrapleacuten o de un desmonte se denominan taludes en el primer caso taludes de terrapleacuten y en el segundo caso taludes de desmonte La estrategia a seguir por el responsable de la obra debe ser com-pensar las tierras y asiacute minimizar la necesidad de recurrir a preacutestamos y vertederos Es importante sa-ber que aunque no esteacute incluido en las actividades de restauracioacuten el movimiento de tierras representa un monto en el presupuesto que por lo general es varios oacuterdenes de magnitud superior al de las actuaciones del capiacutetulo de restauracioacuten y su coor-dinacioacuten con estas actividades posteriores permitiriacutea no solo ganar en eficacia sino potenciales ahorros econoacutemicos para la constructora

Ademaacutes de taludes los espacios en los que se ejecu-tan medidas correctoras ambientales en el entorno de la infraestructura incluyen preacutestamos (generados como consecuencia de la extraccioacuten de materiales constructivos) vertederos (en los que se vierten las tierras no compensadas) parques de maquinaria plantas de asfaltado y hormigonado zonas de aco-pios temporales viario de acceso a la obra entre otras aacutereas de instalaciones auxiliares de obra

Figura 3 Vista aeacuterea de las obras de la variante de El Molar en la A-1 Se puede apreciar la magnitud del impacto producido por el movimiento de tierras y la construccioacuten de un viaducto (Foto OHL)

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Figura 4a Esquema de la construccioacuten de una carretera sobre una ladera 1 Seccioacuten de la ladera sobre la que se va a construir una in-fraestructura lineal de transporte terrestre 2 Se superpone el plano de la plataforma de la viacutea y se oscurece la zona de la ladera que se veraacute afectada por el movimiento de tierras 3 Se realiza un desbroce de toda la vegetacioacuten de la zona afectada 4 Se retiran los 30-40 cm superficiales del aacuterea afectada denominada lsquotierra vegetalrsquo que seraacute acopiada por un tiempo variable hasta su posterior extendido sobre los nuevos planos originados tras los movimientos de tierra 5 Esquema en planos trasluacutecidos de los movimientos de tierra necesarios 6 A la izquierda aparece el volumen de tierra que seraacute necesario excavar para el desmonte y a la derecha el volumen de tierra que seraacute necesario acopiar para construir el terrapleacuten La diferencia entre ambos voluacutemenes se denomina balance del movimiento de tierras si es lt0 es decir se necesita acopiar un volumen superior al que se va a excavar la obra es deficitaria en tierra luego necesitaraacute de una can-tera o preacutestamo de donde obtener este volumen necesario de tierra Por el contrario si es gt0 el volumen de tierra excavado es superior al necesario para acopiar la obra es excedentaria en tierra lo que implica la necesidad de un vertedero donde depositar los voluacutemenes sobrantes Si es =0 los movimientos de tierra estaacute equilibradoscompensados es la situacioacuten oacuteptima ya que no seraacute necesario ocupar espacios adicionales 7 Perfil final tras realizar los movimientos de tierra Quedan construidos tanto el desmonte como el terrapleacuten (se colorea en tono maacutes oscuro el terrapleacuten para diferenciarlo respecto al perfil original) 8 Lo habitual es que sobre los terraplenes se realice tras su construccioacuten un extendido de tierra vegetal de 30-40 cm En desmonte a no ser que sean muy tendidos es decir de pendiente muy baja no se realiza este tipo de actividad (Figura Ignacio Mola)

Figura 4b Resultado de la construccioacuten de la carretera sobre una ladera La superficie ocupada por los taludes (de excavacioacuten o desmonte y de acumulacioacuten o terrapleacuten) constituye junto con las medianas bermas zonas interiores de enlaces etc los principales espacios a restaurar y las dianas maacutes importantes de las actuaciones correctoras y de integracioacuten paisajiacutestica de las infraestructuras de transporte (Figura Ignacio Mola)

III IMPACTOS VARIADOS SOBRE LOS ECOSISTEMAS

La creacioacuten de infraestructuras de transporte ge-nera un amplio nuacutemero de impactos sobre los ecosistemas por los que transcurre La ocupacioacuten del suelo los movimientos y compactacioacuten de tie-rras y la generacioacuten de preacutestamos y vertederos ocasionan un impacto directo en la peacuterdida de la cubierta vegetal y de suelo original con todas sus propiedades bioloacutegicas (Figura 5) El traacutensito de vehiacuteculos y sus emisiones sonoras y gaseosas generan otros efectos indirectos maacutes difiacuteciles de cuantificar (Figura 6) A estos se suman impactos esteacuteticos y paisajiacutesticos ademaacutes de aquellos que afectan a la provisioacuten de bienes y servicios eco-sisteacutemicos Los impactos ecoloacutegicos de la cons-truccioacuten explotacioacuten y eventual deconstruccioacuten son por tanto difiacuteciles de valorar y muchos estaacuten apenas comenzando a conocerse

Figura 5 Movimiento de tierras y generacioacuten de taludes durante la construccioacuten de una autopista (Foto Nerea Aizpurua y Adoracioacuten Goacutemez)

Cuneta

Desmonte

Drenajes del desmonte

Mediana

Terrapleacuten

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Figura 6 Emisioacuten de polvo sobre la vegetacioacuten La fase de cons-truccioacuten genera numerosos impactos sobre la flora y la fauna in-cluyendo el polvo la contaminacioacuten atmosfeacuterica y el ruido (Foto Nerea Aizpurua y Adoracioacuten Goacutemez)

Cuando desaparece la cubierta vegetal por causa de los desbroces o del movimiento de tierras la capa de suelo feacutertil se queda sin el efecto protector que le proporcionaban las raiacuteces y el dosel vegetal En los eventos de lluvia que tengan lugar a continuacioacuten el agua de escorrentiacutea arrastraraacute la capa superior maacutes feacutertil y que contiene propaacutegulos y semillas formaacuten-dose surcos y regueros de difiacutecil colonizacioacuten por las plantas El sustrato que queda despueacutes de que se produzcan fenoacutemenos erosivos importantes es muy pobre y muchas veces demasiado duro para que las semillas puedan enraizar Este efecto se produce es-pecialmente en zonas de elevada pendiente como en los desmontes y terraplenes La peacuterdida de suelo y vegetacioacuten a su vez ejerce una influencia direc-ta e indirecta sobre otros organismos dando lugar a ecosistemas simplificados y poco resilientes es decir con baja capacidad de recuperacioacuten despueacutes de ser perturbados Este ciacuterculo vicioso requiere in-tervencioacuten o de lo contrario se pone en peligro la propia estabilidad de las infraestructuras (Figura 7)

Figura 7 Grandes procesos erosivos tras una lluvia intensa en la Autopista de la Costa del Sol (Maacutelaga) (Foto Fernando Valladares)

La construccioacuten de toda infraestructura viaria desde una perspectiva espacial supone la fragmentacioacuten de los haacutebitats es decir la transformacioacuten del terri-torio al resultar subdividido en fragmentos menores y aislados con la consiguiente reduccioacuten de conec-tividad El tamantildeo de estos fragmentos de territorio condiciona en gran medida la dinaacutemica de las po-blaciones naturales y los patrones de distribucioacuten de numerosos organismos entre los que destacan los vertebrados grupo bioloacutegico sobre el que se han centrado diversos estudios (Robinson et al 1992) producieacutendose incluso una reduccioacuten de la riqueza especiacutefica en las teselas de menor superficie favore-ciendo la aparicioacuten de especies introducidas y aque-llas autoacutectonas maacutes comunes en detrimento de las maacutes especializadas y escasas (Bennett 1990 Gilbert et al 1998) Asiacute mismo producto de esta reduccioacuten de la conectividad las poblaciones de vertebrados pueden quedar subdivididas en poblaciones de me-nor tamantildeo y por ello sometidas a un mayor riesgo de extincioacuten puesto que resultan maacutes sensibles a los fenoacutemenos estocaacutesticos e imprevisibles como incendios sequiacuteas o perturbaciones de origen antroacute-pico (Andrews 1990 Forman y Alexander 1998) La fragmentacioacuten de haacutebitats es un proceso que integra muacuteltiples efectos entre los que destacan la peacuterdi-da y reduccioacuten de calidad del haacutebitat el aumento de la mortalidad por atropello y la modificacioacuten de la conectividad del paisaje Proceso que constitu-ye una de las principales amenazas para especies con amplias aacutereas de campeo siendo el lince ibeacuterico (Lynx pardina) un claro ejemplo de ello (Ferreras et al 1992 Iglesias Merchaacuten 2009) y en suma para la biodiversidad en general (Trombulak y Frissell 2000 Forman et al 2003) comprometiendo el equilibro entre el desarrollo socioeconoacutemico y la conservacioacuten de la fauna

Ademaacutes de los impactos generales ya comenta-dos podemos destacar las siguientes considera-ciones

bull La modificacioacuten del relieve original por los movi-mientos de tierra modifica las redes de drenaje y expone grandes superficies susceptibles de ero-sioacuten y por lo tanto capaces de emitir enormes cantidades de sedimentos lo que produce seve-ras modificaciones en las redes hidrograacuteficas del entorno

bull La peacuterdida o alteracioacuten del haacutebitat no se limita a la zona directamente afectada por la infraes-tructura sino que puede afectar a zonas aleja-das maacutes de 200 metros desde el borde de la misma

bull Las infraestructuras lineales pueden actuar como barrera para la dispersioacuten de algunas especies limi-tando su extensioacuten pero tambieacuten facilitan la disper-sioacuten de especies exoacuteticas con caraacutecter invasor

bull Las infraestructuras lineales son efectivas para la propagacioacuten de enfermedades pudiendo oca-sionar impactos importantes en las poblaciones vegetales y animales

bull La dispersioacuten de otras especies no deseables a traveacutes de la infraestructura viaria puede tener a su vez efectos secundarios en las comunidades nativas

bull Los elementos asociados a la infraestructura tales como puentes y tuacuteneles generan corredores fren-te a barreras geograacuteficas (riacuteos mares cordilleras montantildeosas etc) lo que puede dar lugar a la apa-ricioacuten de especies nuevas para la zona con efectos complejos sobre la red de interacciones bioloacutegicas

bull La peacuterdida de la vegetacioacuten de ribera cuando la infraestructura atraviesa riacuteos o zonas lacustres (Figura 8) provoca alteraciones en la dinaacutemica geomorfoloacutegica del cauce afectando a su esta-bilidad y su potencia hidraacuteulica La peacuterdida de la vegetacioacuten de ribera puede afectar a las carac-teriacutesticas fiacutesico-quiacutemicas del agua y a la calidad general del cauce

bull Las sales empleadas para eliminar el hielo en las carreteras y otros productos quiacutemicos que se antildeaden en la fase de explotacioacuten o uso de la infraestructura modifican las propiedades fiacutesico-quiacutemicas del suelo tales como la conductividad y el pH Las plantas se ven muy afectadas por la toxicidad producida por el aumento en las con-centraciones de iones del suelo y la dificultad para captar agua de eacutel Estas modificaciones pue-den favorecer la aparicioacuten de nuevas comunida-des de plantas y animales formadas por especies tolerantes a la sal (comunidades haloacutefilas)

bull El viento que se crea por el paso de los coches o por la apertura de corredores tiene un impacto adicional sobre las comunidades vegetales y ani-males adyacentes

bull Las emisiones de los vehiacuteculos las partiacuteculas pro-cedentes del deterioro de los neumaacuteticos las peacuter-didas de aceite el ruido y otro tipo de molestias pueden extenderse desde el borde de la carretera a una distancia variable produciendo impactos diversos sobre las comunidades naturales

bull El polvo generado por el traacutefico depositado so-bre las hojas puede afectar a los procesos de fotosiacutentesis y transpiracioacuten de las plantas

bull Las actividades asociadas a las carreteras como estaciones de servicio aacutereas de peaje control y mantenimiento etc generan ademaacutes diversos impactos adicionales

Figura 8 Peacuterdida de la vegetacioacuten de ribera por el paso supe-rior de la Autopista R4 Esta peacuterdida provoca a su vez impactos en la estructura y funcionamiento del riacuteo (Foto Nerea Aizpurua y Adoracioacuten Goacutemez)

Todos estos impactos y muchos maacutes de los que auacuten no somos conscientes requieren una actua-cioacuten previa y posterior para evitarlos atenuarlos o corregirlos En la mayoriacutea de los casos el primer objetivo es hacer frente a las nuevas superficies generadas Los taludes son junto con zonas inte-riores de enlaces preacutestamos vertederos y demaacutes zonas no asfaltadas de la plataforma el foco prin-cipal de las actuaciones de restauracioacuten Y el primer paso se da actuando sobre la vegetacioacuten O sobre la falta de ella

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IV REVEGETACIOacuteN DE TALUDES UN PRIMER PASOhellip iquestEN FALSO

En el disentildeo de taludes la revegetacioacuten y la obra civil siguen criterios contrapuestos (principio de in-compatibilidad) Si el establecimiento de una cubier-ta vegetal requiere sustratos francos que faciliten la progresioacuten subterraacutenea del vegetal la estabilidad estructural de la obra exige que los taludes de te-rrapleacuten se encuentren altamente compactados Por ello los terraplenes se construyen mediante suce-sivas tongadas de unos 30 cm de potencia y los desmontes sufren un refino mediante ripado o vola-duras en liacuteneas con retardadores La acusada dismi-nucioacuten de la porosidad del suelo da lugar a una su-perficie impenetrable de escasa permeabilidad que alcanza temperaturas maacutes elevadas que el entorno para el desarrollo de la microflora y fauna edaacutefica La disparidad de criterios se repite en relacioacuten con el contenido del sustrato en materia orgaacutenica Su valor como fuente de nutrientes y sobre todo su capacidad de retencioacuten hiacutedrica favorece el desarrollo vegetal al tiempo que compromete la estabilidad de los taludes

La solucioacuten habitual a este conflicto implica un compromiso entre los objetivos de la restaura-cioacuten y la obra civil que se traduce en la reali-zacioacuten de labores someras destinadas a facilitar la germinacioacuten y el enraizamiento inicial Estas medidas consisten en el extendido de tierra ve-getal cuya potencia oscila entre 15 y 30 cm o en el uso de mulches o acolchados definidos como recubrimientos permeables de materiales orgaacuteni-cos naturales o sinteacuteticos biodegradables que favorecen la retencioacuten de agua y reducen el ries-go de erosioacuten

El eacutexito de estas labores posteriores depende de variables clave entre las que destacan

1 La pendiente Cuanto maacutes vertical es un talud mayor dificultad ofrece para la revegetacioacuten y mayores son los costes La pendiente es un cociente entre la diferencia de cota (v) y la pro-yeccioacuten horizontal de la distancia recorrida (h) en este caso por un talud Los proyectos de obra suelen determinar una inclinacioacuten para te-rraplenes de 2h1v y para los desmontes maacutes tendidos de 3h2v referidos asiacute tradicional-mente por aplicacioacuten del sistema acotado o de planos acotados al trazado de las infraes-tructuras Por encima de este uacuteltimo valor no

se realizan aportes de tierra vegetal De hecho a medida que la inclinacioacuten se aproxima a este umbral se agrava el riesgo de inestabilidad que en caso de manifestarse no solo cancela el efecto benefactor de estos aportes sobre la cubierta sino que resultariacutea en costosos ate-rramientos de las cunetas Este riesgo se incre-menta a medida que aumenta la potencia de la capa extendida y la longitud de los taludes Para pendientes iguales o superiores a 11 los proyectos de obra no suelen proponer medidas restauradoras

La inclinacioacuten interacciona con variables ambien-tales relevantes como la interceptacioacuten de ra-diacioacuten solar la temperatura y la disponibilidad hiacutedrica Estas interacciones dependen tambieacuten de la orientacioacuten de los taludes Asiacute en taludes orientados a solana una mayor inclinacioacuten deter-mina una mayor exposicioacuten a la radiacioacuten mien-tras que en umbriacutea el incremento de la pendiente tiene el efecto contrario

2 Calidad de la tierra vegetal Es probablemente el factor maacutes determinante del eacutexito de las actuaciones Su accioacuten es muacuteltiple fertilidad por su contenido en materia orgaacutenica y nu-trientes aporte del banco de semilla y de sim-biontes (hongos micorrizoacutegenos y bacterias fijadoras de nitroacutegeno) penetrabilidad gracias a su efecto sobre la textura higroscopicidad y pH En aquellos taludes en los que no se extiende por ahorrar costes por tratarse de desmontes o por su excesiva pendiente la re-vegetacioacuten es notablemente maacutes lenta y en ocasiones infructuosa El acopio de la tierra vegetal durante los movimientos de tierras ge-nerados durante la fase de construccioacuten de la infraestructura es un aspecto delicado que afecta a la utilidad y valor para la restauracioacuten de la tierra vegetal (Figura 9)

3 Carestiacutea de nutrientes Se intenta resolver a corto plazo mediante el uso de fertilizantes solubles y en un creciente nuacutemero de ocasiones con abonos de liberacioacuten lenta Sin embargo el aporte es con frecuencia insuficiente y resulta determinante el contenido en nutrientes del extendido de tierra vegetal que a su vez favorece su retencioacuten y su uso gradual por la vegetacioacuten

Figura 9 La denominada en obra ldquotierra vegetalrdquo se corresponde con los primeros 30-40 cm del suelo que se retira de todas las superficies que se veraacuten afectadas por movimientos de tierra En esta capa estaacuten importantes nutrientes y sobre todo numerosas semillas que permitiraacuten la regeneracioacuten de la cubierta vegetal El almacenamiento de la tierra vegetal es criacutetico no puede mantenerse mucho tiempo porque se pierde la viabilidad de muchas semillas Tambieacuten es criacutetico el efecto dilucioacuten del banco de semillas al mezclarse con otros sustratos o suelos sin semillas o al decantarse (Figura Ignacio Mola)

4 Interaccioacuten con la obra civil Las principales fuen-tes de conflicto son

bull Realizacioacuten de siembras y plantaciones fuera de eacutepoca como consecuencia de las exigencias del plan de obra Dado que el proyecto suele exigir dos antildeos de garantiacutea el contratista se encuentra con un mayor volumen de marras a reponer Este hecho puede encarecer el presupuesto de revege-tacioacuten hasta en un 50

bull Retraso de las siembras En este caso al igual que si lloviera torrencialmente antes de que se cumplieran 15 diacuteas tras la diseminacioacuten de las semillas es de esperar que se disparen fenoacutemenos erosivos y de inestabilidad de

taludes Es notable que maacutes del 10 de las siembras suele repetirse

bull Efectos negativos derivados de la simultanei-dad entre obra civil y restauracioacuten caiacuteda de escombros paso de maquinaria etc

bull Perfilado o refino de taludes con posterioridad a la ejecucioacuten de siembras y plantaciones o al esta-blecimiento espontaacuteneo de una cubierta vegetal

bull Vertido de los materiales procedentes de la lim-pieza de cunetas sobre los taludes sembrados plantados o cubiertos por vegetacioacuten espontaacutenea

bull Instalacioacuten de pasarelas drenajes o medios auxiliares en taludes revegetados previamente

3-5 cm banco desemillas viable

30 cm retiradoscomo tierra vegetal

La tierra vegetal retirada se acopla durante un periodo

de tiempo variable El banco de semillas se diluye por 10

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5 Deficiencias en la ejecucioacuten de los trabajos Las labores de revegetacioacuten de los taludes se realizan en el tramo final del periodo de ejecucioacuten de la infraestructura El balance econoacutemico adverso la multiplicidad de subcontratas la inmediatez de la fecha de entrega la exigencia de un acabado pa-tentemente verde en la inauguracioacuten son causas frecuentes de errores y efectos no deseados

Figura 10 La hidrosiembra es una teacutecnica habitual para sembrar semillas en amplias superficies como los taludes que se generan al crear viacuteas de transporte La hidrosembradora consiste en un vehiacutecu-lo equipado con un tanque o cisterna en cuyo interior se mantiene en el coacutectel en permanente agitacioacuten para asegurar una mezcla homogeacutenea Los modelos de mayores dimensiones como el que aparece en la imagen cuentan con una torreta en la parte superior desde la cual proyectar con una manguera la siembra (Foto Mariacutea Altamirano OHL)

6 Conflicto de intereses entre objetivos propuestos del proyecto de restauracioacuten En la mayoriacutea de los proyectos se proponen como objetivos indepen-dientes la atenuacioacuten de los impactos ambientales y el acondicionamiento esteacutetico En consecuencia se plantean para estos objetivos medidas correcto-ras independientes cuando en la praacutectica interac-cionan Asiacute es frecuente encontrar que las especies ornamentales elegidas para las plantaciones linea-les en las maacutergenes de la viacutea son especies exoacuteticas con un reconocido caraacutecter invasor De esta forma se da la paradoja de que sobre la superficie del ta-lud se valora positivamente la inclusioacuten de especies autoacutectonas aportadas en el coacutectel de hidrosiembra o con las plantaciones y sin embargo en medianas o a pie de talud se favorece a las especies aloacutectonas capaces de propagarse con facilidad y transformar el medio dificultando el ingreso de ejemplares au-toacutectonos o incluso alcanzando espacios naturales en los que su establecimiento puede causar graves dantildeos ambientales

En resumen la revegetacioacuten de taludes es un pri-mer paso habitual en la restauracioacuten de aacutereas afectadas por infraestructuras de transporte pero su ejecucioacuten se apoya frecuentemente en criterios agronoacutemicos y no ecoloacutegicos Ademaacutes colisiona con numerosos aspectos teacutecnicos y praacutecticos re-lativos a la planificacioacuten construccioacuten y funciona-miento de las infraestructuras

V EL SALTO DE LA PRAacuteCTICA ACTUAL A LA APLICACIOacuteN DE LOS PRINCIPIOS DE LA RESTAURACIOacuteN ECOLOacuteGICA

El procedimiento habitual para la revegetacioacuten de taludes y en general para corregir los impactos ge-nerados por la construccioacuten de las infraestructuras de transporte dista significativamente del que ca-briacutea seguir en el caso de que se aplicaran los prin-cipios fundamentales de la restauracioacuten ecoloacutegica En la actualidad los proyectos de obra civil utilizan el establecimiento de cubiertas vegetales como ele-mento constructivo para dotar de estabilidad geo-teacutecnica a los taludes generados como resultado de los movimientos de tierra El ser humano lleva maacutes de 9000 antildeos ejecutando movimientos de tierras con fines constructivos (c 9700 en Tell Abu Hureyra Siria) Las teacutecnicas (siembras y plantaciones) y los elementos (variedades de cultivo fertilizantes etc) necesarios para establecer una cubierta vegetal se remontan auacuten maacutes en el tiempo (c 10500 antildeos en

el Creciente Feacutertil) La adaptacioacuten de los principios y teacutecnicas de cultivo a los fines de la obra civil ha sido un largo proceso que en las uacuteltimas deacutecadas ha dado lugar a teacutecnicas tan especiacuteficas como la hidrosiembra (Figura 10) Su desarrollo ha originado maquinaria especiacutefica (hidrosembradoras) y coacutecteles de siembra complejos (mezclas comerciales de se-millas abonos solubles y de liberacioacuten lenta co-poliacutemeros colorantes mulches estabilizantes) que permiten el establecimiento de una cubierta vegetal eficaz contra la erosioacuten en un plazo inferior a un mes aun en superficies de elevada pendiente o di-fiacutecil accesibilidad

Desde finales del siglo pasado los proyectos de obra civil han incorporado la reconstruccioacuten del medio na-tural entre los objetivos perseguidos Dependiendo

del rigor del proyecto esta meta puede confundir-se con la integracioacuten esteacutetica en el paisaje local o puede ambicionar la restauracioacuten de un mosaico de ecosistemas en consonancia con las condiciones del entorno En este segundo caso no se trata de adecuar las teacutecnicas convencionales para obtener un beneficio antildeadido sino que se estaacute planteando un salto cualitativo para el que se requiere una base conceptual diferente aunque no opuesta

Frente a los meacutetodos habituales los principios baacutesi-cos que deberiacutean inspirar los nuevos protocolos son extraordinariamente recientes El concepto de pai-saje como ente singular no como marco tiene me-nos de 500 antildeos el concepto de comunidad vegetal menos de 200 el de evolucioacuten menos de 150 el de sucesioacuten ecoloacutegica menos de 90 A partir de los antildeos ochenta del siglo xx la demanda de instrumentos que permitieran ralentizar la tasa de extincioacuten de es-pecies y recuperar sus haacutebitats condujo a la revisioacuten de las bases fundamentales de la ecologiacutea Aparece con ello una nueva siacutentesis denominada ecologiacutea de la restauracioacuten En el marco de la obra civil la re-visioacuten de los criterios desde esta nueva perspectiva supone pasar de los planteamientos agronoacutemicos a los ecoloacutegicos lo cual se concreta en desplazar el centro de atencioacuten desde los elementos hacia el sistema Esta afirmacioacuten que puede parecer teoacuterica permite distinguir entre aquellos protocolos que a lo sumo favorecen la estabilidad y aquellos otros dise-ntildeados para ademaacutes orientar y catalizar la reconstruc-cioacuten de ecosistemas Aquellos autores de proyectos jefes y directores de obra auditores ambientales responsables de programas de vigilancia ambien-tal teacutecnicos ambientales que cifran la calidad en la seleccioacuten de especies son herederos del plantea-miento agronoacutemico tradicional son especialistas en elementos Esta perspectiva todaviacutea inspira la mayor parte de los proyectos de obra en la actualidad Asiacute se recomienda el aporte de nutrientes el extendido de una gruesa capa de tierra vegetal y la evaluacioacuten del eacutexito de las siembras atendiendo a valores de co-bertura con independencia de las caracteriacutesticas de la matriz circundante no alterada Desde la perspectiva agronoacutemica se ha realizado un esfuerzo por revalori-zar los protocolos convencionales introduciendo nue-vos elementos Asiacute las mezclas de hidrosiembra se enriquecen antildeadiendo un porcentaje de semillas de especies autoacutectonas Estas propuestas adolecen sin embargo de una visioacuten sisteacutemica de la restauracioacuten

En contraste desde una perspectiva centrada en el sistema la calidad de las propuestas y resultados se deberaacute basar en la restitucioacuten de los procesos ecoloacutegicos clave Seguacuten la Sociedad Internacional

para la Restauracioacuten Ecoloacutegica el objetivo es asistir la evolucioacuten del espacio degradado Este eacutenfasis en los procesos es crucial cuando se trata de restaurar ambientes severamente alterados (Whisenant 1999) tales como desmontes o terraplenes de infraestruc-turas lineales Se debe prestar un menor intereacutes a la estructura del ecosistema a recrear (disponibi-lidad de nutrientes y agua presencia de especies dominantes) para dedicar una mayor atencioacuten a los procesos que regulan los flujos de los recursos limi-tantes dentro y a traveacutes de las ceacutelulas del paisaje a recuperar

Los procesos clave son

1 La estabilidad y el control de la erosioacuten

2 La hidrologiacutea

3 El ciclo de los nutrientes

4 La captura y transferencia de la energiacutea

Administraciones ingenieriacuteas y constructoras ten-draacuten que optar ante la dicotomiacutea existente entre mantener los protocolos convencionales ligeramen-te mejorados con por ejemplo la incorporacioacuten de semillas de especies autoacutectonas o con aportes de tierra vegetal de potencia mayor y revisar dichos protocolos desde la oacuteptica de la restauracioacuten ecoloacute-gica esto es de la restitucioacuten de procesos

El principal escollo en el disentildeo de nuevos proto-colos desde la perspectiva de la ecologiacutea de la res-tauracioacuten reside en que se conoce muy poco sobre el funcionamiento de los procesos clave en los talu-des Las comunidades vegetales que se establecen de forma espontaacutenea en los taludes de carretera di-fieren en contra de lo esperado de las catalogadas como lsquocomunidades ruderales o de bordes de cami-nosrsquo Algunos cientiacuteficos han propuesto que aque-llos ecosistemas que presentan una composicioacuten de especies con abundancias relativas que no se ha-biacutean encontrado previamente en un amplio territorio de clima homogeacuteneo sean denominados ecosiste-mas emergentes (Hobbs et al 2006) Ejemplos de ecosistemas emergentes son los bosques tropicales lluviosos sabanizados por la apertura de viacuteas de co-municacioacuten las granjas abandonadas de moluscos y crustaacuteceos en manglares y los matorrales mediterraacute-neos alterados por la contaminacioacuten atmosfeacuterica la invasioacuten de especies exoacuteticas y el sobrepastoreo La novedad de todos estos ecosistemas introduce un elevado grado de incertidumbre sobre cuaacutel deberiacutea ser el ecosistema de referencia que permita orientar

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el horizonte de las actuaciones de restauracioacuten Si las comunidades de desmontes y terraplenes forman parte de ecosistemas emergentes y no pueden iden-tificarse con ninguna de las etapas de las series de vegetacioacuten descritas las comunidades maduras que

habitan en las laderas dejan de ser una referencia vaacutelida De ser este el caso es auacuten maacutes acuciante centrar las actuaciones en la restitucioacuten de procesos maacutes que en aproximar la composicioacuten floriacutestica a la de una determinada comunidad diana

VI SIETE RAZONES PARA LA RESTAURACIOacuteN ECOLOacuteGICA DE AacuteREAS AFECTADAS POR INFRAESTRUCTURAS DE TRANSPORTE

Razoacuten 1 por su extensioacuten

Seguacuten el Anuario 2009 publicado por el Ministerio de Fomento se calcula que la densidad de carreteras en Espantildea es de 0328 kmkm2 (Figura 11 y Tabla 1) Este dato permite estimar la superficie total que ocupan las superficies a restaurar de carreteras en el Estado Analizando los distintos tipos de viacuteas la estimacioacuten asciende a unos 5000 km2 Este valor es notablemente

superior al de otros escenarios en los que desde los antildeos setenta se exige la ejecucioacuten integral de un plan de restauracioacuten como es el caso de las escombreras generadas como consecuencia de actividades extracti-vas Asiacute la superficie estimada ocupada por estos es-cenarios equivale a maacutes de 250 veces la superficie to-tal de la escombrera de la corta de carboacuten de Puentes de Garciacutea Rodriacuteguez en La Coruntildea (800 ha) probable-mente la de mayores dimensiones del Estado espantildeol

Figura 11 Dos indicadores de la red de carreteras espantildeola para las diferentes comunidades autoacutenomas kiloacutemetros de red por kiloacutemetro cuadrado (barras en color gris) y kiloacutemetros de red por cada mil habitantes (barras en color amarillo) Tomado del Anuario estadiacutestico 2009 Ministerio de Fomento

En el aacutembito de la conservacioacuten de la biodiversi-dad esa estimacioacuten de la superficie ocupada por las superficies de carretera a restaurar equivale a 10 veces la extensioacuten de un parque nacional tan emble-maacutetico como Dontildeana (50720 ha) Parece a nuestro juicio una negligencia el limitar el tratamiento de una superficie tan extensa a soluciones estaacutendares alejadas de los rigurosos criterios de la restauracioacuten ecoloacutegica como herramienta para la conservacioacuten

de la diversidad bioloacutegica Hasta el presente estos criterios se han aplicado en todo caso a la inte-gracioacuten paisajiacutestica de espacios generados tras la eliminacioacuten de infraestructuras abandonadas Las razones expuestas maacutes abajo en lo referente a su geometriacutea singularidad e integracioacuten en el funcio-namiento ecoloacutegico del mosaico de ecosistemas jus-tifican a nuestro juicio que se reconsidere y revise esta praacutectica

Tabla 1 Red de carreteras del Estado Comunidades Autoacutenomas y Diputaciones y Cabildos seguacuten su tipologiacutea()

ANtildeOSRED

NACIONAL TOTAL

TOTALVIacuteAS DE GRAN

CAPACIDAD

AUTOPISTAS DE PEAJE

AUTOVIacuteASCARRETERAS DE DOBLE CALZADA

RESTO DE LA RED

OTRAS CARRETERAS

1970 139212 203 82 121 - 139009 -

1980 149576 1933 1530 403 - 147643 -

1985(1) 153253 2925 1798 498 629 150328 168470

1990 156243 5624 1887 2806 931 150619 168470

1994(2) 162169 7748 2023 4474 1251 154448 168470

2000 163557 10443 2202 6847 1394 153114 168470

2008(2) 165008 15105 2997 10521 1587 149903 168470

2009(p) 165463 15621 3016 11005 1599 149843 168470

Datos obtenidos del Anuario Estadiacutestico 2009 Ministerio de Fomento Fuente DG de Carreteras (Ministerio de Fomento) comunidades autoacutenomas y diputaciones () Ademaacutes de este viario los ayuntamientos (dato 1998) tiene 489698 km de los cuales 361517 km son interurbanos y ademaacutes existen 11355 (dato 1998) de viario de otros organismos (1) A partir de 1985 aparece la tipologiacutea de carreteras de doble calzada y se hacen homogeacuteneas las series teniendo en cuenta esta clase de carreteras Ademaacutes se incluyen otras carreteras o caminos vecinales a cargo de los ayuntamientos ICONA IRYDA Ministerio de De-fensa organismos autoacutenomos y otros organismos (2) Se elabora en este antildeo un nuevo inventario en la red de carreteras del Estado (p) Datos provisionales

Razoacuten 2 por su geometriacutea

A pesar de su vasta extensioacuten el aprovechamiento po-tencial de este espacio viene draacutesticamente condicio-nado por su geometriacutea en estrechas franjas a ambos lados de la viacutea El desarrollo de la Ecologiacutea del Paisaje en su acepcioacuten anglosajona (Forman y Godron 1986) y del anaacutelisis de las repercusiones de la fragmentacioacuten de haacutebitats evidencia las limitaciones de la geometriacutea de los taludes de carretera para acoger ecosistemas maduros o complejos dado que se trata de espacios marginales sometidos a un intenso efecto borde En

este contexto el efecto borde se define como la per-meabilidad a los impactos causados por la proximidad de la viacutea La penetracioacuten de este efecto es diferente para cada especie y para cada haacutebitat (Tabla 2) Este fenoacutemeno debe reflejarse tanto en las propuestas de restauracioacuten ecoloacutegica como en el espacio disponible para su ejecucioacuten La normativa deslinda desde la Ley 251988 de Carreteras y Caminos tres zonas anidadas de influencia de la viacutea la de dominio puacuteblico de ser-vidumbre y de afeccioacuten En autopistas autoviacuteas y viacuteas raacutepidas la zona de dominio puacuteblico se extiende hasta 8 m desde la arista exterior de la explanacioacuten (es decir

Indicadores km de redkm2 y km de redmil habitantes

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Km de red1000 habitantes

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desde la interseccioacuten del talud con el terreno original adyacente) La zona de servidumbre se extiende 25 m desde el mismo eje y la de afeccioacuten alcanza los 100 m La Ley andaluza 82001 probablemente la norma de carreteras maacutes avanzada en materia ambiental delimi-ta el espacio en el que deben ejecutarse las medidas y proyectos de integracioacuten ambiental y restauracioacuten pai-sajiacutestica Asiacute dentro de la zona de servidumbre legal el uso de los terrenos por sus propietarios o titulares estaacuten supeditados a su compatibilidad con la integra-cioacuten ambiental y paisajiacutestica de la carretera Asimismo las medidas de integracioacuten ambiental o restauracioacuten del paisaje podraacuten ocupar las zonas de afeccioacuten que incluso podraacuten ampliarse maacutes allaacute de los 100 m desde

la explanacioacuten si existen razones ambientales que lo justifiquen a juicio de la Administracioacuten

En conclusioacuten los taludes son espacios afectados por la existencia y funcionamiento de la viacutea pero la publicacioacuten de normas tan avanzadas como la andaluza permite disentildear y ejecutar protocolos de restauracioacuten ecoloacutegica en un espacio que no solo no se circunscribe al de la explanacioacuten sino que puede ocupar toda la superficie que se considere oportuna por su vinculacioacuten desde un punto de vista ecoloacutegico lo cual abre la puerta a que se pueda proyectar algo maacutes ambicioso que el simple maquillaje verde

mediterraacuteneo (Figura 12) Cabe destacar que tambieacuten hay una importante representacioacuten de especies exoacute-ticas (introducidas procedentes de otros territorios aloacutectonas) e incluso un 3 de endemismos

Elemento aloacutectono

Elemento cosmopolita y subcosmopolita

Elemento eurosiberiano-atlaacutentico-mediterraacuteneo

Elemento endeacutemico ibeacuterico

Elemento mediterraacuteneo

Figura 12 Representacioacuten graacutefica del porcentaje de taxones perte-neciente a cada uno de los distintos elementos coroloacutegicos identifi-cados en la flora de los taludes madrilentildeos Fuente Loacutepez Jimeacutenez N 2004 VII Congreso Nacional de Medio Ambiente

Algunas de las comunidades vegetales descritas o reconocidas en taludes de carretera tambieacuten se en-cuentran en otras localizaciones taludes artificiales creados en la construccioacuten de otras infraestructuras o edificaciones paisajes agriacutecolas espacios natura-les protegidos Sin embargo tambieacuten se han descrito comunidades vegetales que alcanzan su mayor rique-za y complejidad en taludes de carretera y rara vez se encuentran en otros enclaves (Schaffers y Sy cora 2002) La singularidad de las comunidades vegetales en estos enclaves viene dada por tres contingentes

Figura 13 En la obra Las amapolas de Claude Monet (1873) ya se aprecia una mayor frecuencia de estas plantas en el terrapleacuten que en los campos de labor

Especies exoacuteticas La frecuencia de estas especies en las comunidades de taludes de carretera es ma-yor que en otras formaciones comparables alejadas de la viacutea (Hansen y Clevenger 2005)

1 Especies nativas arvenses y de pastizales El aban-dono de las teacutecnicas tradicionales de cultivo y de ganaderiacutea extensiva el uso de herbicidas la peacuterdida de tierras agriacutecolas son las causas prin-cipales de la desaparicioacuten progresiva de especies arvenses ruderales y de pastizales que hasta hace poco tiempo eran muy comunes (Figura 13) Los taludes de carreteras pueden actuar como refugio (Tikka et al 2000) e incluso como corredores que favorezcan su propagacioacuten y contribuyan a reducir su riesgo de extincioacuten (Tikka et al 2001)

2 Especies que toleran el reacutegimen de perturbaciones En cualquier ecosistema la presencia de un deter-minado mosaico de comunidades de organismos viene determinado por el reacutegimen de perturbacio-nes (fuegos inundaciones etc) En los taludes de carretera ese reacutegimen viene definido por las ope-raciones de mantenimiento de la viacutea (vertido de tierras procedentes de la limpieza de cunetas sie-gas podas etc) En consecuencia las operaciones de mantenimiento determinan tanto la vegetacioacuten como la fauna de los taludes Asiacute entre las espe-cies lentildeosas las operaciones de limpieza mecaacutenica (gradeo o fresado) parecen estar seleccionando a las especies rebrotadoras frente a las que carecen de esta cualidad (Spooner 2005) Es sabido que las labores de siega alteran la frecuencia con la que aparecen en estos medios distintos mamiacuteferos de pequentildeo porte (Meunier et al 1999)

Este efecto modelador de las operaciones de manteni-miento podriacutea aprovecharse con el fin de potenciar el papel de los taludes como refugio y corredor para el desplazamiento de especies vegetales e incluso como sumidero de las emisiones de dioacutexido de carbono

3 Especies nativas en entornos transformados La agricultura intensiva y la urbanizacioacuten han relega-do a la flora espontaacutenea local a los taludes de carretera convirtieacutendose estos en la mejor repre-sentacioacuten de las especies y comunidades autoacutecto-nas cuando no en el uacuteltimo reducto (Figura 14) La conservacioacuten de las franjas de vegetacioacuten nativa en las maacutergenes de las viacuteas de transporte se ha reclamado incluso en marcos tan emblemaacuteticos como la Amazoniacutea brasilentildea territorio en el que la subvencioacuten de la expansioacuten de las tierras agriacutecolas ha conducido a que se pongan en cultivo incluso los taludes de carretera (Allen 1997)

Tabla 2 Efectos de la penetracioacuten de efecto de borde de las carreteras asfaltadas en diferentes grupos de mamiacuteferos y aves

GRUPO HAacuteBITAT ALCANCE DEL EFECTO (M)

Ungulados Bosque 90-200

Osos Bosque 2500 (con traacutefico)

Osos Bosque 740 (sin traacutefico)

Linces Bosque 100

Lobos Bosque 2000

Insectiacutevoros Bosque 800

Limiacutecolas Prados 2000 (traacutefico denso)

Limiacutecolas Prados 625 (poco traacutefico)

Varias especies de aves Prados 810

Varias especies de aves Bosque 100-680

Varias especies de aves Cultivos 300

Fuente Elaborado a partir de Delgado JD 2003

Razoacuten 3 por su singularidad

En botaacutenica se ha acuntildeado el teacutermino de vegetacioacuten ruderal o viaria para reunir a aquellas comunidades vegetales propias de bordes de caminos sometidas a constantes perturbaciones entre ellas el pisoteo de los transeuacutentes Se trata de comunidades forma-das por especies cosmopolitas es decir de amplia distribucioacuten en el planeta Sin embargo no es este el perfil de la flora que se encuentra en los taludes

de carretera En un territorio floriacutesticamente pobre como el Reino Unido el 435 de las especies apa-recen representadas en los taludes (Way 1977) En la Comunidad de Madrid caracterizada por una ele-vada riqueza de especies vegetales un estudio de-tallado de la flora de los taludes (Loacutepez Jimeacutenez et al 2004) observaba que nada menos que el 14 de los taxones de este territorio aparece represen-tado en ellos es decir 385 de 2684 siendo el con-tingente maacutes numeroso no el cosmopolita sino el

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253

IacuteNDICE

ESPECIES INVASORAS

Debido a la severidad de las alteraciones los es-pacios afectados por movimientos de tierras son susceptibles de ser colonizados por especies in-vasoras Se muestran seis ejemplos de especies catalogadas como invasoras (Sanz Elorza et al 2004) que han sido detectadas en taludes de ca-rretera De izquierda a derecha y de arriba abajo coniza del Canadaacute (Conyza canadensis) hierba del asno (Oenothera glazioviana) aacuterbol del cielo

(Ailanthus altissima) aquilea amarilla (Achillea fi-lipendulina) amapola de California (Eschscholzia californica) y chumbera (Opuntia maxima) Autor Ignacio Mola

Sanz Elorza M Dana Saacutenchez ED amp Sobrino Ves-perinas E eds 2004 Atlas de las Plantas Aloacutectonas Invasoras en Espantildea Direccioacuten General para la Bio-diversidad Madrid 384 pp

GEacuteNERO CENTAUREA

Las centauras son un geacutenero de plantas (Cen-taurea) que bien sirven de ejemplo de la elevada diversidad floriacutestica existente en los taludes de carretera Se muestran en la laacutemina seis ejem-plos de especies de este geacutenero que se pueden encontrar en estos medios en diferentes puntos

de la Peniacutensula Ibeacuterica De izquierda a derecha y de arriba abajo centaura (Centaurea seridis) rompe piedras (C aspera) abrepuntildeos (C calci-trapa) garbanzos del cura (C alba) clavel de San Juan (C cyanus) y arzolla (C ornata) Autor Ignacio Mola

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Figura 14 En vastas extensiones del Estado australiano de Victoria la vegetacioacuten espontaacutenea autoacutectona solo se conserva en las riberas de los riacuteos y en los taludes de infraestructuras lineales como consecuencia de la ocupacioacuten del territorio por la agricultura En la imagen puede apreciarse la banda de vegetacioacuten espontaacutenea en las maacutergenes de la carretera en una matriz de campos arados

Razoacuten 4 por su interaccioacuten con el entorno

La interaccioacuten ecoloacutegica de los taludes de las viacuteas de transporte con su entorno inmediato deriva de su condicioacuten de corredores Es decir por su geometriacutea canalizan flujos longitudinales y constituyen barreras para flujos transversales Sus dimensiones ademaacutes les fuerzan a atravesar una amplia representacioacuten de ecosistemas Si bien todas las interacciones son po-tencialmente relevantes es evidente que estos efec-tos son particularmente notables cuando el trazado de la viacutea atraviesa espacios naturales de intereacutes o particularmente sensibles

1 Conectividad La conectividad de las viacuteas de co-municacioacuten con su entorno tiene dos importan-tes efectos que son antagoacutenicos y ocurren de forma simultaacutenea el efecto barrera y el efecto conector

Efecto barrera Las viacuteas de comunicacioacuten como ba-rreras fragmentan poblaciones tanto de animales como de vegetales La construccioacuten de pasos de fauna pretende evitar la irrupcioacuten de animales en las calzadas y facilitar el que puedan franquear el obstaacuteculo que representa la viacutea La restauracioacuten ecoloacutegica en el entorno de la viacutea puede contribuir

a mejorar la eficiencia de estos pasos El concurso de la restauracioacuten ecoloacutegica es especialmente re-levante en el caso de los grandes pasos superio-res con tipologiacutea constructiva de falso tuacutenel desti-nados a ungulados y carniacutevoros conocidos como ecoductos o conectores de paisaje La eficiencia de estos ecoductos depende ademaacutes de sus di-mensiones y ubicacioacuten del eacutexito en la ocultacioacuten de la viacutea y en la recreacioacuten del paisaje a lo largo del recorrido de estos pasos de fauna

Frente a este efecto barrera negativo los talu-des de carretera podriacutean ejercer un efecto ba-rrera positivo cuando el objetivo es apantallar las emisiones procedentes del traacutefico rodado Fundamentalmente ruidos y contaminantes En el caso de los ruidos es sabido que la eficacia como aislante acuacutestico de una cubierta vegetal de reducido porte es muy deficiente Sin embar-go puede desempentildear un papel relevante como filtro de partiacuteculas de emisiones de gases con-taminantes como oacutexidos de nitroacutegeno e incluso como sumidero de dioacutexido de carbono (Forman et al 2003) La capacidad de la actividad vegetal en el entorno de la viacutea como sumidero de CO

2

depende del aprovechamiento que se le deacute a los restos vegetales cosechados

Efecto conector Los taludes tambieacuten pueden funcionar como conectores contribuyendo a aminorar los efectos de la fragmentacioacuten de haacute-bitats y poblaciones Con frecuencia se ha asu-mido que las maacutergenes de carretera mantienen poblaciones de especies vegetales forestales solo como consecuencia de la colonizacioacuten rei-terada de individuos procedentes de fragmentos de bosque conservados en el entorno sin que puedan completarse los ciclos vitales de estas especies en los taludes debido al marcado efec-to borde y al draacutestico reacutegimen de perturbacio-nes en este medio Sin embargo algunos auto-res sostienen que los taludes pueden funcionar como haacutebitats estables e incluso como corredo-res que permitan conectar fragmentos alejados de formaciones vegetales aisladas en el seno de matrices transformadas por la agricultura y la urbanizacioacuten (Deckers et al 2005) Pequentildeos nuacutecleos poblacionales de especies vegetales amenazadas podriacutean actuar como conectores a modo de lsquocadena de trampolinesrsquo (conocidos en ingleacutes como stepping stones) que propicia-ran la propagacioacuten de frutos semillas polen esporas polinizadores dispersores de frutos manteniendo la funcionalidad del conjunto de fragmentos es decir de la metapoblacioacuten El hecho de que los taludes pudieran cumplir este papel de conectores no es trivial En caso de que estos corredores fueran eficaces podriacutean tener un papel en la conservacioacuten de especies en el marco del cambio climaacutetico al ofrecer viacuteas de migracioacuten reduciendo el riesgo de extincioacuten de los taxones sensibles (Tikka et al 2001) Sin embargo para cumplir estos objetivos es pre-ciso revisar y adecuar las praacutecticas actuales de mantenimiento y limpieza de los espacios ane-jos a la viacutea

2 Propagacioacuten de invasiones bioloacutegicas Es un he-cho indiscutible que de entre todas las especies animales y vegetales introducidas procedentes de territorios geograacuteficamente alejados el 1permil altera draacutesticamente el funcionamiento ecoloacutegico de los territorios invadidos con efectos no de-seados en la economiacutea local en la forma de vida en los asentamientos humanos afectados y en la conservacioacuten del patrimonio natural Tal como se

ha destacado en el epiacutegrafe anterior los taludes de carretera son enclaves enriquecidos en espe-cies exoacuteticas que dada su geometriacutea podriacutean propiciar su propagacioacuten

En Espantildea este fenoacutemeno se ha visto agravado tanto por el desconocimiento de este fenoacutemeno por parte de los responsables del disentildeo ejecu-cioacuten y gestioacuten de las infraestructuras (Figura 15) como por el divorcio en los proyectos de obra entre los objetivos de integracioacuten ambiental y de acondicionamiento esteacutetico A la hora de estimar el riesgo debe tenerse en cuenta que tanto la frecuencia de invasiones como su propagacioacuten a lo largo de la viacutea se ve favorecida por la dispo-nibilidad de recursos (agua y nutrientes) por lo que seraacute mayor en la Espantildea atlaacutentica que en la mediterraacutenea

Figura 15 Manuales teacutecnicos publicados por la Administracioacuten es-pantildeola (Ruiz de la Torre 1990) recomiendan expresamente el uso del ailanto en proyectos de obra civil a pesar de que esta especie estaacute considerada como uno de los invasores maacutes agresivos en la cuenca del Mediterraacuteneo En la imagen los ejemplares de ailanto no son plantados sino que se propagan espontaacuteneamente por los taludes de la Ciudad Universitaria de Madrid

Razoacuten 5 por su potencial para promover valores naturales culturales y educativos

Actualmente los objetivos que se persiguen en los proyectos de revegetacioacuten de taludes de carretera son cuatro 1) estabilizacioacuten geoteacutecnica de los taludes y control de la erosioacuten 2) integracioacuten visual en el pai-saje 3) adecuacioacuten esteacutetica y 4) seguridad vial

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IacuteNDICE

iquestES LA RESTAURACIOacuteN DE TALUDES DE LA RED VIARIA UN EJERCICIO DE JARDINERIacuteA O DE CONSERVACIOacuteN DEL PATRIMONIO NATURAL

La integracioacuten paisajiacutestica frecuentemente es el objetivo principal de la restauracioacuten de la cubierta vegetal en espacios afectados por obras civiles La eficacia de esta funcioacuten en amplias extensio-nes de la Peniacutensula Ibeacuterica es cuestionable de-bido a la profunda transformacioacuten antroacutepica del paisaje en la Cuenca del Mediterraacuteneo A lo largo de vastas extensiones los taludes de carreteras y viacuteas del ferrocarril deberiacutean ser sembrados con cereales abandonados o simplemente asfaltados si lo que se pretende es su convergencia con el

paisaje circundante La falta de un referente in-mediato de cubierta vegetal silvestre atribuiriacutea a la restauracioacuten una funcioacuten puramente esteacutetica siendo sus protocolos teacutecnicos un ejercicio de ajardinamiento

La escasa ambicioacuten de este planteamiento con-trasta con la estrategia adoptada en paiacuteses como Australia En las zonas mas pobladas del paiacutes el paisaje es una sucesioacuten de explotaciones agriacutecolas sin solucioacuten de continuidad las maacutergenes de las principales carreteras son los uacutenicos reductos en los que se mantiene la vegetacioacuten autoacutectona Las bandas de vegetacioacuten de entre 10 y 200 m a los lados de estas viacuteas constituyen una enorme red cuya extensioacuten solo en el estado de Victoria supera los 5500 km2 El reconocimiento del valor ecoloacutegi-co de este entramado de corredores ha conducido a su denominacioacuten como reservas (road reserves) Su gestioacuten compete a las administraciones respon-sables del transporte y del medio ambiente aseso-radas por comiteacutes cientiacuteficos

Estos objetivos no contemplan ni la singularidad de las comunidades de organismos asociados a la viacutea ni el valor de los taludes por su interaccioacuten ecoloacutegica con el entorno Las reflexiones presentadas en los cuatro epiacutegrafes anteriores sugieren que el nivel de ambicioacuten de las propuestas puede ser muy superior Ese salto cualitativo estariacutea vinculado a la incorporacioacuten de cri-terios ecoloacutegicos en la transformacioacuten del territorio El disentildeo ejecucioacuten y gestioacuten del acondicionamiento de los taludes de las infraestructuras de transporte podriacutea llegar a perseguir tanto la conservacioacuten de la biodiversidad como la educacioacuten ambiental

Conservacioacuten de la biodiversidad Los objetivos par-ticulares en el entorno de la infraestructura seriacutean los siguientes

bull Asegurar la calidad de las aguas y el control de la erosioacuten en el entorno de la viacutea

bull Proteger y favorecer los restos conservados de vegetacioacuten nativa

bull Identificar y proteger las especies amenaza-das de flora y fauna

bull Ubicar en funcioacuten del entorno y acondicionar los taludes como corredores para el desplaza-miento de la flora y fauna nativa

bull Acondicionar los taludes como haacutebitats para la vida silvestre preservando los recursos ne-cesarios para el desarrollo de las comunida-des de microorganismos vegetales de aves reptiles mamiacuteferos etc

bull Restablecer la vegetacioacuten nativa mediante protocolos que propicien la regeneracioacuten na-tural o mediante restauracioacuten activa

bull Identificar restaurar y proteger las riberas y humedales en el entorno de la viacutea

bull Asegurar la conservacioacuten del banco de diaacutes-poras y formas de resistencia

bull Controlar la colonizacioacuten y propagacioacuten de es-pecies invasoras y de otras plagas o agentes patoacutegenos

bull Regular el uso de los taludes por herbiacutevoros

bull Regular quemas controladas y evitar riesgos de incendio

bull Promover cubiertas vegetales que amortiguumlen las emisiones de contaminantes procedentes de la viacutea

bull Promover la capacidad de los taludes como sumideros de CO

2

Educacioacuten ambiental El objetivo general es divulgar los valores del patrimonio natural local a traveacutes de la identificacioacuten y reconstruccioacuten de paisajes repre-sentativos Como objetivos particulares incluye

bull Mantener y restaurar el atractivo visual del paisaje en el entorno de la viacutea

bull Identificar y proteger paisajes y enclaves con valor cultural o histoacuterico

bull Regular el uso recreativo de la viacutea y su entorno

Razoacuten 6 por imperativo legal o exigencia normativa

La Directiva comunitaria 85337CEE considera entre otros aspectos que los efectos de un proyecto sobre el medio ambiente deben evaluarse para proteger la salud humana contribuir mediante un mejor entorno a la calidad de vida velar por el mantenimiento de la diversidad de especies y para conservar la ca-pacidad de reproduccioacuten del sistema como recurso fundamental de la vida La incorporacioacuten en Espa-ntildea de esta Directiva 85337CEE al Derecho interno estatal se efectuoacute mediante el RDL 13021986 que experimentoacute sucesivas modificaciones y el Regla-mento que lo desarrolla el RD 11311988 Con pos-terioridad el RDL 12008 por el que se aproboacute el texto refundido de Ley de Evaluacioacuten de Impacto Ambiental de proyectos derogaba el RDL 13021986 y sus modificaciones y finalmente el RDL 12008 ha sido a su vez modificado por la reciente Ley 62010 Simultaacuteneamente la Directiva 85337CEE ha sido modificada por las Directivas 9711CE y 200335CE

En la actualidad praacutecticamente la totalidad de los proyectos de infraestructuras de transporte puacuteblicos

y privados que correspondan a autopistas y auto-viacuteas viacuteas raacutepidas y carreteras convencionales de nuevo trazado modificacioacuten del trazado o duplica-ciones de calzada de otras existentes en una longi-tud continuada de maacutes de 10 km y las liacuteneas de fe-rrocarril para traacutefico de largo recorrido deben some-terse a evaluacioacuten de impacto ambiental en la forma prevista en la Ley Mientras que la obligatoriedad de someter a evaluacioacuten de impacto ambiental el resto de carreteras y liacuteneas ferroviarias que quedan fuera del aacutembito competencial del Estado y no reuacutenan las anteriores caracteriacutesticas se determina en las corres-pondientes normativas autonoacutemicas

De modo general el proyecto para el tratamiento de los espacios afectados por las obras se articula en torno a los potenciales impactos ambientales Desde los Reales Decretos 13021986 y 11311988 se esta-blece que los estudios de impacto ambiental deben proponer las actuaciones necesarias para evitar re-ducir o compensar los efectos ambientales negativos significativos Estas acciones reciben el nombre de medidas protectoras (o preventivas) correctoras y compensatorias respectivamente La legislacioacuten baacute-sica de evaluacioacuten de impacto ambiental de proyec-tos sumada a sus homoacutelogas autonoacutemicas extien-de el dominio de aplicacioacuten de estas definiciones al aacutembito de las infraestructuras lineales que desde el punto de vista de la ecologiacutea de la restauracioacuten en el antildeo 1998 se definiacutea como un gigante dormido por Forman y Alexander gigante por la extensioacuten de superficie afectada y la trascendencia de la adopcioacuten de criterios ecoloacutegicos y dormido por la exigua re-percusioacuten de sus planteamientos aseveraciones por fortuna difiacuteciles de mantener en la actualidad

Razoacuten 7 por una nueva visioacuten en la construccioacuten de infraestructuras

Dos iniciativas una puacuteblica y otra privada plantean en la actualidad la revisioacuten de los criterios que se vienen empleando en la integracioacuten ambiental de las infraestructuras de transporte De una parte la elaboracioacuten del Plan Estrateacutegico de Infraestructuras y Transporte (PEIT) con el objetivo de proponer las medidas que puedan contribuir a mejorar la compe-titividad econoacutemica la cohesioacuten territorial y social y la seguridad y calidad del servicio desde los prin-cipios de racionalidad y eficiencia en el uso de los recursos (httppeitcedexes) Entre las recomenda-ciones del Informe de Sostenibilidad Ambiental del PEIT elaborado en enero de 2005 se planteaba la mejora de los procedimientos y las praacutecticas de eva-luacioacuten ambiental a todos los niveles de decisioacuten el

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incremento de la inversioacuten en seguimiento y control ambiental de todos los elementos del sistema de transporte y de forma destacable la mejora del co-nocimiento faacutectico de las relaciones entre el medio ambiente el territorio y el sistema de transporte a las diversas escalas que requiere el proceso de pla-nificacioacuten del transporte apoyar la I+D+i en tecno-logiacuteas de disminucioacuten del impacto ambiental de las infraestructuras y de los equipos del transporte

Para la consecucioacuten de estos objetivos el PEIT se plantea una inversioacuten de 248892 millones de euros y el horizonte temporal del 2020 al que se llegaraacute tras atravesar tres fases de desarrollo En la actuali-dad se ha completado la primera fase (2005-2008) en la que se persigue establecer las bases del cam-bio para el disentildeo de alternativas teacutecnicas que mejo-ren el comportamiento ambiental del sector

La segunda iniciativa que plantea una revisioacuten de los criterios con los que se viene disentildeando y ejecutan-do la construccioacuten de infraestructuras de transporte es la creacioacuten y puesta en marcha de la Plataforma Tecnoloacutegica de la Construccioacuten bajo el lema lsquoHacia el 2030 Innovacioacuten y cambio eficiente del Sector de la Construccioacutenrsquo Esta Plataforma pretende actuar sobre el nivel tecnoloacutegico del sector en Espantildea y persigue la mejora de la eficiencia de la productividad y de la seguridad asiacute como la disminucioacuten del impacto en el medio ambiente que el sector tiene actualmente Para ello la Plataforma estaacute formada por representantes de todos los agentes del sector de la construccioacuten en Espantildea Para minimizar los impactos ambientales esta Visioacuten 2030 se plantea como reto alcanzable a corto plazo la reduccioacuten significativa de las aacutereas afectadas por los trabajos y la revegetacioacuten de es-pacios degradados empleando especies autoacutectonas

VII ESTRUCTURA Y OBJETIVOS DEL LIBRO

El libro que el lector tiene en sus manos resume el conocimiento de un variado nuacutemero de especialistas que se interesan por la atenuacioacuten de los impactos y por la restauracioacuten ecoloacutegica de las aacutereas afecta-das por infraestructuras lineales El libro repasa la informacioacuten disponible para aspectos geomorfoloacute-gicos hidroloacutegicos edafoloacutegicos botaacutenicos fauniacutes-ticos ecoloacutegicos y tecnoloacutegicos los complementa con la realidad y la necesidad de los programas de seguimiento y vigilancia ambiental y nos recuerda lo que la legislacioacuten vigente especifica sobre impac-tos correcciones y restauraciones Pero el libro no se queda ahiacute ya que pretende anticipar los cambios de paradigma que se vislumbran en cada disciplina y aportar sugerencias concretas para modernizar la aproximacioacuten al problema ambiental generado con la creacioacuten de estas infraestructuras

En los capiacutetulos centrales del libro el lector no encontraraacute recetas concretas a seguir pero si los principios que pueden dar lugar a estas recetas

especiacuteficas para cada caso Se repasan los errores frecuentes y las ensentildeanzas que de ellos se pueden extraer y se describen casos exitosos que pueden servir de referencia El lector encontraraacute tambieacuten fuentes adicionales de informacioacuten tanto trabajos cientiacuteficos como fuentes documentales diversas y bases de datos en internet El libro pretende ser uacutetil para todos aquellos que trabajen en proyectos de infraestructuras de transporte o tengan intereacutes por la aplicacioacuten de los principios de la restaura-cioacuten ecoloacutegica a unos ecosistemas cada vez mas importantes Pero tambieacuten busca desafiar los pa-radigmas actuales y la normativa vigente abriendo temas que necesariamente deberaacuten ser abordados con mas profundidad en un futuro a medida que sepamos maacutes sobre estos ecosistemas nuevos emergentes que surgen tras la construccioacuten de es-tas omnipresentes infraestructuras y a medida que la sociedad en su conjunto vaya demandando un enfoque ambientalmente maacutes exigente de las acti-vidades humanas

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BOE 2008 Real Decreto Legislativo 12008 de 11 de enero por el que se aprueba el texto refundido de la Ley de Evaluacioacuten de Impacto Ambiental de pro-yectos Boletiacuten Oficial del Estado nordm 23 del saacutebado 26 enero 2008 4986-5000 httpwwwboeesboedias20080126pdfsA04986-05000pdf

BOE 2010 Ley 62010 de 24 de marzo de modifi-cacioacuten del texto refundido de la Ley de Evaluacioacuten de Impacto Ambiental de proyectos aprobado por el Real Decreto Legislativo 12008 de 11 de enero Boletiacuten Oficial del Estado nordm 73 del jueves 25 de marzo de 2010 28590-28597 httpwwwboeesboedias20100325pdfsBOE-A-2010-4908pdf

BOJA 2001 Ley 82001 de Carreteras de Andaluciacutea Bo-letiacuten Oficial de la Junta de Andaluciacutea nordm 85 del jueves 26 de julio de 2001 12799ndash12820 httpwwwjunta-deandaluciaesbojaboletines200185dupdfd1pdf

DO 1985 Directiva 85337CEE del Consejo de 27 de junio de 1985 relativa a la evaluacioacuten de las repercu-siones de determinados proyectos puacuteblicos y privados sobre el medio ambiente DO L 175 de 571985 p 4048 httpeur-lexeuropaeuLexUriServLexUriServdouri=CELEX31985L0337ESHTML

DO 1997 Directiva 9711CE del Consejo de 3 de marzo de 1997 por la que se modifica la Directiva 85337CEE relativa a la evaluacioacuten de las repercusiones de deter-minados proyectos puacuteblicos y privados sobre el medio ambiente DO L 73 de 1431997 p 515 httpeur-lexeuropaeuLexUriServLexUriServdouri=CELEX31997L0011ESHTML

DO 2003 Directiva 200335CE del Parlamento Euro-peo y del Consejo de 26 de mayo de 2003 por la que se establecen medidas para la participacioacuten del puacuteblico en la elaboracioacuten de determinados planes y programas relacionados con el medio ambiente y por la que se modifican en lo que se refiere a la participacioacuten del puacuteblico y el acceso a la justicia las Directivas 85337CEE y 9661CE del Consejo-Declaracioacuten de la Comisioacuten DO L 156 de 2562003 p 1725 httpeur-lexeuropaeuLexUriServLexUriServdouri=OJL200315600170024ESPDF

Notas sobre legislacioacuten

La Directiva comunitaria 85337CEE de junio de 1985 consideraba entre otros aspectos que los efectos de un proyecto sobre el medio ambiente deben evaluarse para proteger la salud humana contribuir mediante un mejor entorno a la calidad de vida velar por el mante-nimiento de la diversidad de especies y para conservar la capacidad de reproduccioacuten del sistema como recurso fundamental de la vida

La incorporacioacuten en Espantildea de esta Directiva 85337CEE al Derecho interno estatal se efectuoacute mediante norma con rango de Ley al aprobarse el Real Decreto Legislativo 13021986 Por su parte las comunidades autoacutenomas de acuerdo con las competencias que les reconocen los respectivos estatutos de autonomiacutea han desarrollado la normativa baacutesica de evaluacioacuten de im-pacto ambiental

Con posterioridad la Directiva 9711CE del Consejo ampliacutea esta obligacioacuten a la construccioacuten de nuevas ca-rreteras de cuatro carriles o maacutes o realineamiento yo ensanche de una carretera existente de dos carriles o menos con objeto de conseguir cuatro carriles o maacutes cuando tal nueva carretera o el tramo de carretera rea-lineado yo ensanchado alcance o supere los 10 km en una longitud continua

PLANTAS DE TALUDES

Los espacios que circundan las carre-teras son considerados en la actua-lidad terrenos marginales Curiosa-mente prosperan numerosas espe-cies vegetales de indudable belleza como las que se muestran a conti-nuacioacuten De arriba abajo cebolla de culebra (Asphodelus fistulosus) lechetrezna (Euphorbia helioscopia) y clavel de asno (Agrosthemma gi-thago) Autor Ignacio Mola

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2Consideraciones geomorfoloacutegicas e hidroloacutegicas

Joseacute F Martiacuten Duque Saturnino de Alba y Fernando Barbero Abolafio

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se puede llegar a la misma conclusioacuten que para Es-tados Unidos

Estas reflexiones parecen estar fuera del aacutembito de las ciencias geoloacutegicas y geomorfoloacutegicas de modo que mover tierras para construir una infraestructura lineal o el asfaltado de carreteras no se consideran temas o procesos centrales de esas ciencias Sin em-bargo las cifras aportadas muestran escenarios en los que las actividades humanas se han convertido en el principal agente geomorfoloacutegico que actual-mente modifica la superficie terrestre Entre ellas la construccioacuten de infraestructuras lineales es una de las maacutes importantes Por todo ello la transforma-cioacuten de la superficie terrestre debida a esta actividad constructiva deberiacutea estar entre la corriente domi-nante de los trabajos geoloacutegicos y geomorfoloacutegicos actuales

Respecto a superficies afectadas Hooke et al (2010) utilizando datos de todos los paiacuteses que cuentan con informacioacuten disponible a este respecto han es-timado que alrededor de 06 millones de kiloacutemetros cuadrados de la superficie terrestre estaacuten ocupados por infraestructuras lineales en zonas rurales (exclui-da su ocupacioacuten en aacutereas urbanas que computariacutea como superficies urbanas) Todo ello supone una ocupacioacuten de aproximadamente un 05 de la su-perficie terrestre continental libre de hielos

En paiacuteses desarrollados este porcentaje se situacutea en torno al 1 Forman y Alexander (1998) y Forman (2000) sostienen que los corredores de carreteras cubririacutean aproximadamente el 1 de Estados Uni-dos citando para ello datos del National Research Council (1997 p 181) Por su parte Luis Balaguer (com pers) utilizando datos oficiales del Ministe-rio de Fomento tambieacuten ha estimado que maacutes de 5000 km2 (lo que equivale a un 1 de la superficie de nuestro paiacutes o a 10 veces el tamantildeo del Parque Nacional de Dontildeana) estaacuten cubiertos por autoviacuteas autopistas o carreteras

El aacuterea total ocupada por infraestructuras lineales de transporte (el 05 de la superficie continental libre de hielos alrededor del 1 en paiacuteses desa-rrollados) puede parecer pequentildea Sin embargo los efectos ambientales de estas superficies alteradas son mucho mayores de lo que podriacutean sugerir esas cifras Asiacute Forman y Alexander (1998) estiman que entre el 15 y el 20 de la superficie de los Estados Unidos estaacute ecoloacutegicamente afectada por carreteras considerando todos los impactos que estas ocasio-nan fragmentacioacuten de haacutebitats emisioacuten de agentes contaminantes escorrentiacutea y sedimentos que causan

efectos adversos en amplias superficies terrestres y acuaacuteticas entre otros

Como es faacutecil de comprender lo maacutes probable es que todas estas cifras se incrementen en un futuro en un escenario en el que se mantiene el crecimiento imparable de la poblacioacuten mundial y el desarrollo econoacutemico de los paiacuteses emergentes Por consi-guiente se ejerceraacute una importante presioacuten cons-tructiva sobre muchos territorios visible ya en de-terminados aacutembitos (Figura 1) Todo ello refuerza la enorme importancia que tiene la integracioacuten ambien-tal y la restauracioacuten ecoloacutegica de estos espacios con el fin de minimizar la peacuterdida de bienes y servicios ambientales para el conjunto de la sociedad

Figura 1 La presioacuten constructiva sobre muchos territorios es tal que como en el caso que muestra la fotografiacutea el trazado de una carretera anterior relleno por materiales de escombrera puede quedar incorporado a modo de registro sedimentario en el des-monte de una carretera maacutes reciente La liacutenea blanca discontinua sentildeala esta exposicioacuten singular Sobre ella pueden identificarse un corte perpendicular de la plataforma de la carretera el asfalto (A) las cunetas (B) y los antiguos desmontes (C) (Foto F Barbero)

2 Un enfoque geomorfoloacutegico para comprender el problema

Cualquier superficie terrestre funciona como un sis-tema que tiende a mantener un lsquoequilibrio dinaacutemicorsquo entre las formas del terreno que observamos y los procesos geomorfoloacutegicos e hidroloacutegicos que actuacutean sobre ellas En efecto con anterioridad a las modi-ficaciones humanas la mayor parte de las cuencas hidrograacuteficas en que se organiza el territorio estaacuten proacuteximas a una situacioacuten de equilibrio (que es siem-pre dinaacutemico) y los procesos de erosioacuten transporte y sedimentacioacuten estaacuten adaptados a las condiciones ambientales existentes (Graf 1977)

La construccioacuten de infraestructuras lineales supone una perturbacioacuten antroacutepica de primera magnitud en

CAPIacuteTULO 2 Consideraciones geomorfoloacutegicas e hidroloacutegicas

Joseacute F Martiacuten Duque Saturnino de Alba y Fernando Barbero Abolafio

I INTRODUCCIOacuteN

1 La construccioacuten de infraestructuras lineales como proceso geomorfoloacutegico

El movimiento de tierras asociado a la construccioacuten de infraestructuras lineales constituye uno de los procesos geomorfoloacutegicos maacutes activos y efectivos a escala global Hooke (1994) estimoacute que la construc-cioacuten de carreteras en Estados Unidos movilizaba tres gigatoneladas de materiales al antildeo (en 1994) Esta cifra suponiacutea casi el 40 del total de movimientos de tierras por actividades humanas en Estados Uni-dos completado por 1 Gtantildeo de la urbanizacioacuten y 38 Gtantildeo de la mineriacutea de superficie Y la suma de todos ellos se situaba en el mismo orden de mag-nitud que lo estimado para los agentes geoloacutegicos denominados lsquonaturalesrsquo en ese contexto espacial y temporal (riacuteos glaciares vientohellip) (Hooke 1994)

En Espantildea la previsioacuten inicial del Plan Espantildeol de Infraestructuras de Transportes (PEIT) era construir entre 2005 y 2020 un total de 6000 km de auto-viacuteas y autopistas y 9000 km de ferrocarril de alta velocidad incluyendo la adecuacioacuten de liacuteneas exis-tentes a altas prestaciones (Ministerio de Fomento 2005) Utilizando una estimacioacuten de movimiento de tierras de 10 m3 por metro lineal construido y una densidad aparente de 2 tm3 se obtiene una cifra de movimiento de tierras de en torno a 300 millo-nes de toneladas (20 millones de toneladas al antildeo) De nuevo utilizando la estimacioacuten del transporte de sedimentos desde los riacuteos hasta los oceacuteanos para Espantildea a partir del trabajo de Syvitski et al (2005)

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tanto no solo modifica la cubierta vegetal y edaacutefica sino todos los componentes de la superficie terres-tre (como sustrato y topografiacutea) Ello origina todo un conjunto de nuevas formas del terreno a modo de auteacutenticas morfologiacuteas erosivas (pe desmontes) y de verdaderas acumulaciones sedimentarias (pe terraplenes) asiacute como nuevas condiciones hidroloacutegi-cas y edaacuteficas En definitiva la apertura de infraes-tructuras lineales altera las condiciones de ese lsquoequi-librio dinaacutemicorsquo Normalmente se produce una acele-racioacuten de los procesos geomorfoloacutegicos activos en el dominio de carreteras y ferrocarriles pero tambieacuten ocurre una deceleracioacuten o anulacioacuten de los mismos como sucede en las superficies pavimentadas En todo caso siempre acontece una modificacioacuten de los flujos de agua y materiales en todo su contexto

Los nuevos procesos desencadenados por la cons-truccioacuten de infraestructuras lineales que actuacutean so-bre las nuevas formas del relieve creadas (desmontes

Figura 3 Morfologiacuteas que se desarrollan de manera maacutes lsquotiacutepicarsquo sobre cada una de las litologiacuteas detriacuteticas que caracterizan los desmontes de las infraestructuras lineales de la cuenca de Madrid bajo condiciones climaacuteticas mediterraacuteneas (en Barbero et al 2009a) (Fotos JF Martiacuten Duque)

terraplenes bermas plataformashellip) y sobre su en-torno son una manifestacioacuten del trabajo geomorfo-loacutegico para restablecer un nuevo equilibrio dinaacutemico entre las formas del terreno creadas por la actividad constructiva y los procesos geomorfoloacutegicos activos que son caracteriacutesticos de las condiciones ambienta-les locales (Schumm y Rea 1995) Este es el motivo por el cual el entorno de las infraestructuras lineales especialmente los desmontes de carreteras y ferro-carriles constituyen escenarios donde la dinaacutemica geomorfoloacutegica es muy evidente (Petersen 2002)

Para analizar y comprender esa dinaacutemica es posible seguir una aproximacioacuten geomorfoloacutegica lsquoclaacutesicarsquo basada en el anaacutelisis de las formas del terreno y de los procesos que las originan (Pedraza 1996) La diferencia fundamental es la escala de detalle de este nuevo anaacutelisis (Figura 2) que permite hablar de toda una lsquogeomorfologiacutea de carreterasrsquo ya iniciada en algunos trabajos (Barbero et al 2009a Figura 3)

Figura 2 Flujos de barro (mudflows) en un pequentildeo desmonte de una carretera local Los procesos geomorfoloacutegicos que se desarrollan en estos desmontes son similares a los que operan en otros ambientes continentales (por ejemplo zonas de montantildea) pero tienen mucho menor tamantildeo (Foto JF Martiacuten Duque)

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A Distinta respuesta morfoloacutegica seguacuten la litolo-giacutea Sobre conglomerados (con tonos maacutes grisaacute-ceos) la red de drenaje tiene un menor grado de incisioacuten debido a la presencia de cantos y blo-ques que dificultan el encajamiento en los ma-teriales maacutes arenosos (con tonos maacutes rojizos) la escorrentiacutea concentrada consigue desarrollar una red paralela de regueros (rills)

B Patroacuten de drenaje paralelo muy bien definido El espaciado regular entre el conjunto de regueros (rills) y sus interfluvios en la base del desmonte se interpreta como una herencia del acabado del talud con las untildeas de una retroexcavadora que posteriormente es remodelado y exagerado por la erosioacuten hiacutedrica

C Los procesos erosivos actuacutean de manera raacutepida y efectiva en desmontes desarrollados sobre ma-teriales no consolidados o poco consolidados y son maacutes efectivos cuanto maacutes arenoso es el ma-terial del desmonte La red de drenaje en este tipo de materiales arenosos es subparalela ten-dente a dendriacutetica

D La presencia de materiales arcillosos en los ta-ludes favorece el desarrollo de redes de drenaje con una mayor tendencia a ser dendriacuteticas Se reproduce asiacute a escala de gran detalle el mismo tipo de red de drenaje que ocurre en paisajes dominados por sustratos de dominancia arcillosa

E Los desmontes construidos sobre lutitas con fre-cuencia son maacutes verticales que sobre otros mate-riales puesto que su cohesioacuten lo permite Estas paredes casi verticales sufren procesos de meteo-rizacioacuten formando estructuras tipo pop-corn una especie de lsquocostrarsquo que en este caso tiene entre unos pocos miliacutemetros y 2 cm de espesor y se agrieta formando poliacutegonos de 3-4 cm de radio Estos lsquofragmentos de cortezarsquo sufren caiacutedas acu-mulaacutendose en la base del desmonte a modo de talud de derrubios Una vez que la costra se cae esta vuelve a formarse y a fragmentarse a partir de sucesivos ciclos de humectacioacuten-desecacioacuten hasta que vuelven a sufrir nuevas caiacutedas Ocasio-nalmente aparecen morfologiacuteas de tipo flujo de barro (mudflow)

F Los desmontes de la imagen reproducen en mi-niatura el modelo geomorfoloacutegico de un escarpe montantildeoso La parte superior de talud aparece expuesta a los procesos de meteorizacioacuten-ero-sioacuten y la base del talud se caracteriza por una acumulacioacuten de derrubios a modo de lsquoderrame

enormemente su dinaacutemica geomorfoloacutegica de modo que las rocas lsquodurasrsquo (macizos rocosos) son propen-sas a la ocurrencia de movimientos gravitacionales (como caiacutedas y desprendimientos) pero no a la ero-sioacuten hiacutedrica mientras que las rocas lsquoblandasrsquo (referi-das frecuentemente como lsquosuelosrsquo en el mundo de la ingenieriacutea) son maacutes propensas a la erosioacuten hiacutedrica aunque tambieacuten desarrollan movimientos gravitacio-nales (como deslizamientos y flujos) El clima es otro factor de primer orden los climas lsquohuacutemedosrsquo favorecen la ocurrencia de movimientos gravitacio-nales por saturacioacuten y aumento de la presioacuten del agua en el sustrato mientras que en climas ten-dentes a la aridez como los mediterraacuteneos semiaacute-ridos o aacuteridos la erosioacuten hiacutedrica es muy intensa dado que las precipitaciones aunque escasas y de corta duracioacuten tienen gran intensidad Finalmente

dentro de un mismo contexto geoloacutegico y climaacute-tico los desmontes y los terraplenes constituyen dos mundos aparte dado que los primeros dejan expuestos sustratos geoloacutegicos de muy distinta naturaleza mientras que los segundos se constru-yen a partir de materiales lsquosueltosrsquo cuyas carac-teriacutesticas fiacutesicas aun compactados les hacen muy diferentes a los desmontes

En Espantildea las principales limitaciones geomor-foloacutegicas a la restauracioacuten ecoloacutegica tienen lugar cuando se solapan en un mismo territorio el clima mediterraacuteneo semiaacuterido con precipitaciones esca-sas pero intensas y litologiacuteas no consolidadas o deacutebilmente consolidadas (como arenas limos arci-llas margas o yesos) lo que resulta en procesos de erosioacuten hiacutedrica muy intensa (veacutease Figura 3)

de laderarsquo (talus slope) que muestra una gran actividad geomorfoloacutegica Puntualmente son re-conocibles canales y acumulaciones de flujos de derrubios (debris flow) de nuevo en miniatura

El disentildeo y construccioacuten de las infraestructuras li-neales deben estar encaminados a reorganizar la red de drenaje que se modifica y a garantizar una esta-bilidad geoteacutecnica del conjunto dadas las caracteriacutes-ticas de seguridad que deben existir en estos espa-cios En este contexto el teacutermino lsquoinestabilidadrsquo apli-cado a taludes de infraestructuras lineales se asocia mayoritariamente a la ocurrencia o a la propensioacuten de ocurrencia de los llamados lsquoprocesos gravitacio-nalesrsquo lsquomovimientos de laderarsquo o lsquomovimientos en masarsquo de tipo caiacutedas flujos y deslizamientos (Pedra-za 1996) y que son normalmente de cierta entidad

Sin embargo los criterios de seguridad geoteacutecnica no aseguran por siacute solos una estabilidad completa de los taludes puesto que casi siempre existe una inestabilidad geomorfoloacutegica gravitacional lsquomenorrsquo (movimientos en masa muy superficiales) y sobre todo asociada a la erosioacuten hiacutedrica (arranque y trans-porte de materiales por el flujo de la escorrentiacutea)

La inestabilidad del sustrato de taludes de infraes-tructuras lineales debida a movimientos gravita-cionales superficiales y a la erosioacuten hiacutedrica limita extraordinariamente sus posibilidades de restaura-cioacuten ecoloacutegica al evacuar de ellos agua nutrien-tes y diaacutesporas vegetales (veacutease capiacutetulo sobre ve-getacioacuten) Tanto es asiacute que existen ya demasiados ejemplos de fallos en los protocolos de revegetacioacuten habituales en estos espacios debidos a la inestabi-lidad geomorfoloacutegica

En este contexto las labores de disentildeo construccioacuten y restauracioacuten de infraestructuras lineales deberiacutean tratar de comprender y minimizar las modificaciones hidroloacutegicas y la actividad geomorfoloacutegica asiacute como de controlarla y manejarla adecuadamente desde su conocimiento dejando un lsquoajuste maacutes finorsquo a los procesos naturales que actuaraacuten despueacutes de esas intervenciones (Toy y Black 2000) Obviamente la consideracioacuten realizada es muy general y debe adap-tarse a los distintos condicionantes y escenarios

Dentro de estos y como una primera aproximacioacuten habriacutea que distinguir entre el marco litoloacutegico y cli-maacutetico asiacute como la naturaleza del talud puesto que una variacioacuten de cada uno de esos factores introdu-ce otros de naturaleza ecoloacutegica que son determi-nantes Asiacute por ejemplo el tipo de sustrato sobre el que se construye la infraestructura condiciona

II REVISIOacuteN DEL CONOCIMIENTO

Existen dos grandes bloques de antecedentes biblio-graacuteficos sobre los aspectos tratados en este capiacutetulo Por un lado se situacutean los que podriacuteamos denominar lsquotradicionalesrsquo o lsquoconvencionalesrsquo dejando claro que esta clasificacioacuten ni tiene caraacutecter peyorativo ni les resta validez pues constituyen el punto de partida para otros enfoques

Estos pueden tener a su vez naturaleza hidroloacutegica o geoteacutecnica Es preciso explicar que este capiacutetulo intenta sintetizar sus aspectos esenciales pero en ninguacuten caso intenta incorporar una revisioacuten detalla-da sobre ellos dado que estaacuten ampliamente desa-rrollados en muy diversas publicaciones De ellas se ofrece una seleccioacuten de referencias uacutetiles en cas-tellano

Asiacute las cosas para el control del drenaje superficial (escorrentiacutea y sus caudales punta) aspecto funda-mental en la construccioacuten de infraestructuras linea-les existe una instruccioacuten de carreteras (52-1C) de obligado cumplimiento basada en el meacutetodo racio-nal con uso del nuacutemero de curva en la estimacioacuten de las abstracciones iniciales (BOE 1990) Ambos meacutetodos estaacuten bien desarrollados en el manual ya claacutesico de TRAGSA (1994)

Respecto a los antecedentes sobre estabilidad geo-teacutecnica de taludes dado que los movimientos gra-vitacionales (caiacutedas deslizamientos flujoshellip) son el tipo de inestabilidad maacutes comuacuten en el entorno de las infraestructuras lineales la literatura sobre este

tipo de procesos es abundante Algunos libros mo-dernos en castellano son los de Gonzaacutelez de Vallejo (2002) o Ayala y Andreacuteu (2006)

En estos manuales se desarrollan las medidas ha-bituales para la prevencioacuten y correccioacuten de movi-mientos del terreno en taludes de infraestructuras lineales como el empleo de bulones que ayudan a mantener la friccioacuten entre bloques adyacentes de rocas el uso de todo tipo de mallas o la instalacioacuten de drenajes que evacuan el agua del interior de los taludes evitando el aumento de su presioacuten y redu-ciendo por tanto la probabilidad de que ocurran inestabilidades

El estudio y la adopcioacuten de medidas hidroloacutegicas y geoteacutecnicas que aquiacute hemos agrupado como lsquotradi-cionalesrsquo o lsquoconvencionalesrsquo pueden ser necesarios en una parte de los casos ya sea como punto de partida o bien como solucioacuten definitiva Pero al mis-mo tiempo es preciso sentildealar que el control o ma-nejo de las dinaacutemicas hidroloacutegica y geomorfoloacutegica en el entorno de las infraestructuras lineales reali-zado desde una aproximacioacuten ecoloacutegica requiere ir maacutes allaacute de esos planteamientos baacutesicos Incluso puede diferir sustancialmente de ellos Esto es asiacute porque el criterio que ha regido y rige las actua-ciones sobre estas materias en las infraestructuras lineales ha tenido y tiene en cuenta casi exclusi-vamente factores de seguridad Y si bien es obvio que este factor no puede descuidarse en absoluto no es menos cierto que existen ya experiencias que

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III INCIDENCIA DE LOS PROCESOS GEOLOacuteGICOS E HIDROLOacuteGICOS ACTIVOS SOBRE LAS INFRAESTRUCTURAS RIESGOS NATURALES

Si bien la construccioacuten de infraestructuras lineales tiene como consecuencia el desencadenamiento de toda una serie de procesos geomorfoloacutegicos activos (que seraacuten tratados en el siguiente apartado) lo cier-to es que existen posibles afecciones de procesos geoloacutegicos e hidroloacutegicos activos cuya ocurrencia no estaacute asociada en principio ni a las infraestructuras lineales ni a los efectos de su construccioacuten Es el caso de terremotos erupciones volcaacutenicas grandes deslizamientos de laderas o procesos de erosioacuten o inundacioacuten que afectan a las infraestructuras linea-les sin que la construccioacuten de estas uacuteltimas tenga influencia alguna en los primeros

consiguen garantizar el objetivo de hacer posible un transporte seguro y eficiente de personas y bienes a lo largo del territorio asegurando simultaacuteneamente una disminucioacuten de sus efectos ecoloacutegicos una in-tegracioacuten ambiental eficiente y una reduccioacuten de los costes econoacutemicos (veacutease maacutes adelante por ejem-plo la solucioacuten del lsquotalud Royalrsquo)

En esta oacuterbita se situacutea un segundo bloque de an-tecedentes bibliograacuteficos que persigue introducir nuevas consideraciones geomorfoloacutegicas e hidroloacute-gicas para la integracioacuten ambiental y la restauracioacuten ecoloacutegica del entorno de infraestructuras lineales Este enfoque requiere en general soluciones maacutes imaginativas maacutes flexibles y un anaacutelisis particu-larizado del contexto hidroloacutegico y geomorfoloacutegico del lugar que se modifica Todo lo cual se aleja en cierto modo del modus operandi dominante carac-terizado por lsquouna forma rutinaria de hacer las cosasrsquo (bussiness as usual) En este sentido el objetivo de este capiacutetulo es proporcionar unas consideraciones generales pero no por ello menos importantes que permitan lsquorepensarrsquo los proyectos de disentildeo cons-truccioacuten y restauracioacuten de infraestructuras lineales desde una perspectiva que considere como conjunto esencial de las mismas su dinaacutemica geomorfoloacutegica e hidroloacutegica

Para abordar ese enfoque la revisioacuten del conoci-miento no puede centildeirse a trabajos en castellano por ser muy escasos y parte de una serie de es-tudios realizados desde las deacutecadas de los sesen-ta y los setenta en Estados Unidos Estos abordan cuestiones sobre cuantificacioacuten de los procesos de escorrentiacutea erosioacuten y sedimentacioacuten hiacutedricas en ta-ludes de infraestructuras lineales y sobre la adop-cioacuten de medidas para su control Inicialmente los trabajos consistieron en una aplicacioacuten de la expe-riencia adquirida sobre erosioacuten en tierras agriacutecolas como la Ecuacioacuten Universal de Peacuterdidas del Suelo (USLE) que luego fueron completados con estudios experimentales ad hoc (Diseker y Richardson 1961 1962 Diseker y Sheridan 1971 Meyer et al 1971 Meyer y Roumlmkens 1976) Posteriormente estos tra-bajos tuvieron un mayor desarrollo de nuevo en Estados Unidos a partir de la aprobacioacuten en 1972 de la Clear Water Act Esta ley se dictoacute para pro-teger la calidad de las aguas continentales y los ecosistemas acuaacuteticos de la emisioacuten de escorrentiacutea y sedimentos desde las denominadas zonas lsquocons-truidasrsquo (minas carreteras urbanizacioneshellip) hacia los cauces naturales

En el marco de la Clear Water Act los estudios se refirieron inicialmente a los efectos hidroloacutegicos

debidos a la construccioacuten de pistas y carreteras forestales (Megahan 1977 Reid y Dunne 1984 Montgomery 1994 Gucinski et al 2000) La im-portancia de estos trabajos dariacutea lugar en el antildeo 2001 a la publicacioacuten de un monograacutefico espe-cial de la revista Earth Surface Processes and Lan-dforms sobre los efectos hidroloacutegicos y geomor-foloacutegicos de las carreteras forestales (Luce y Wemple 2001)

En paralelo al estudio de los efectos geomorfoloacutegico e hidroloacutegico de las pistas forestales se fueron de-sarrollando trabajos que abordan especiacuteficamente la temaacutetica geomorfoloacutegica en el aacutembito de las ca-rreteras y las viacuteas raacutepidas Alguno de estos trabajos tiene maacutes de 40 antildeos (Parker y Jenne 1967) y otros son bastante maacutes recientes (Haigh 1985 Al-Homoud et al 1999 Nyssen et al 2002)

La publicacioacuten de soluciones para el control efectivo de la erosioacuten y la sedimentacioacuten desde el aacutembito general de zonas sujetas a movimientos de tierras o lsquozonas construidasrsquo es comuacuten de nuevo en Es-tados Unidos (Gray y Sotir 1996 Fifield 2004 Ho-gan y Drake 2009 Bugosh 2006 y en general todo lo relacionado con la International Erosion Control Association IECA httpwwwiecaorg) De manera especiacutefica la mayoriacutea de los estados de ese paiacutes cuenta con manuales e instrucciones detalladas so-bre el control de la erosioacuten y sobre el resto de los aspectos tratados en este capiacutetulo (veacutease a modo de ejemplo WSDOT 2010)

A su vez cabe destacar que algunos trabajos recien-tes estaacuten desarrollando anaacutelisis sobre la calidad de las aguas procedentes de la escorrentiacutea de las carre-teras (Riley et al 2008)

Sin embargo en Espantildea los temas sobre cuantifi-cacioacuten de los procesos de escorrentiacutea erosioacuten y se-dimentacioacuten hiacutedricas en taludes de infraestructuras lineales y la buacutesqueda de medidas de control efi-caces pueden considerarse como liacuteneas de trabajo (tanto desde un punto de vista profesional como desde la investigacioacuten) muy poco desarrolladas Ello puede ser debido quizaacutes a la inexistencia de normativas similares a la Clear Water Act En todo caso la guiacutea para la elaboracioacuten de estudios de im-pacto ambiental de carreteras y ferrocarriles (MOPU 1989) sintetiza bien los aspectos clave que deben abordarse en referencia a los aspectos tratados en este capiacutetulo (recogidos alliacute bajo los epiacutegrafes de geologiacutea geomorfologiacutea hidrologiacutea y suelos) Y otra serie de trabajos maacutes especiacuteficos constitu-yen ya un cataacutelogo de antecedentes de intereacutes en

La prediccioacuten y prevencioacuten de este tipo de afeccio-nes no inducidas por la construccioacuten de carrete-ras y ferrocarriles deberiacutea formar parte de un tipo de estudios especiacuteficos sobre riesgos geoloacutegicos y naturales desarrollados en las fases iniciales de consideracioacuten de alternativas y de disentildeo de esas infraestructuras lineales Este tipo de anaacutelisis no se considera en este manual por superar sus objetivos y se emplaza al usuario a utilizar otras guiacuteas que los tratan en profundidad Veacuteanse por ejemplo en castellano y recientes Ayala y Olcina (2002) Aramburu et al (2006) Keller y Blodgett (2007) o Regueiro (2008)

IV INCIDENCIA DE LAS INFRAESTRUCTURAS SOBRE EL MEDIO IMPACTO GEOMORFOLOacuteGICO E HIDROLOacuteGICO

1 Las causas

Las modificaciones que introducen las infraestruc-turas lineales sobre las caracteriacutesticas geoloacutegicas geomorfoloacutegicas edaacuteficas e hidroloacutegicas pueden analizarse a dos niveles a escala de ladera por variacioacuten de las condiciones fiacutesicas locales de los nuevos taludes creados y a escala de paisaje por alteracioacuten de los flujos y los procesos que operan en el entorno de las infraestructuras

a Modificacionesdelascondicionesgeomorfoloacutegicasehidroloacutegicaslocales

El acabado final de los taludes de las infraestruc-turas lineales transforma una serie de factores que favorecen su inestabilidad geomorfoloacutegica tales como producir un aumento de la pendiente cortar niveles freaacuteticos y modificar las propiedades fiacutesicas de los sustratos expuestos entre otros

Ciertamente la praacutectica constructiva de infraestruc-turas lineales lleva aparejada un aumento de la pendiente local de una buena parte del territorio modificado La alteracioacuten de este factor por siacute solo

contribuye a aumentar la inestabilidad de los nue-vos taludes creados En otros casos sin embargo puede producirse una disminucioacuten de la pendiente como ocurre en las propias plataformas o en algu-nos terraplenes

A su vez una buena parte de las excavaciones asociadas a la construccioacuten de infraestructuras cortan formaciones geoloacutegicas que almacenan y transmiten agua lo que origina surgencias y re-zumes en los desmontes Esta circunstancia que podriacutea parecer una ventaja para la restauracioacuten ecoloacutegica en ambientes semiaacuteridos acaba convir-tieacutendose en la mayor parte de los casos en un pro-blema porque acelera la actividad geomorfoloacutegica de los desmontes Se desencadenan asiacute distintos tipos de movimientos gravitacionales los cuales aparecen recogidos en la literatura como seepage erosion La experiencia muestra coacutemo la previsioacuten de afectar a la dinaacutemica de las aguas subterraacuteneas es uno de los aspectos menos considerados y maacutes difiacuteciles de controlar en la construccioacuten de carrete-ras y ferrocarriles (Figuras 4 y 5)

nuestro paiacutes (Arnaacuteez y Larrea 1995 Andreacutes y Jorba 2000 Navarro 2002 Bochet y Garciacutea-Fayos 2004

Bochet et al 2007a 2007b y 2010 Barbero et al 2009a 2009b)

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Figura 4 Cabecera de deslizamiento (A) y derrubios movilizados (B) en un desmonte de carretera a favor de una surgencia de agua (C) producida en el contacto entre una roca impermeable (D) y unos cantos y bloques permeables (E) correspondientes a un depoacutesito de abanico aluvial (Foto JF Martiacuten Duque)

Figura 5 Ejemplo de seepage erosion en un desmonte construido sobre materiales arenosos (Foto J Vaacutezquez)

De manera adicional se modifican las propiedades fiacutesicas de las nuevas superficies expuestas sobre

Figura 7 Ejemplo de encharcamiento ocasionado por el efecto lsquobarrera o presarsquo que ejerce la carretera sobre el flujo hidroloacutegico superficial y subterraacuteneo procedente de la ladera de la derecha de la imagen (Foto JF Martiacuten Duque)

Una consecuencia maacutes es la modificacioacuten que se produce en la recarga de los acuiacuteferos como conse-cuencia de las alteraciones de la dinaacutemica hidroloacutegi-ca superficial y subterraacutenea antes descritas

2 Los efectos Impactos geomorfoloacutegicos e hidroloacutegicos habituales

Al igual que las causas los impactos geomorfoloacutegi-cos e hidroloacutegicos ocasionados por la construccioacuten de las infraestructuras lineales pueden agruparse en dos grandes tipologiacuteas efectos sobre el propio aacutembito de las construcciones (on-site effects) y efectos sobre el entorno de las construcciones (off-site effects)

a Efectoson-site

Las consecuencias que produce la modificacioacuten de la pendiente y la alteracioacuten de las propiedades fiacutesicas e hidroloacutegicas de los nuevos sustratos expuestos en los taludes fundamentalmente en los desmontes se manifiestan generalmente en un aumento de la escorrentiacutea y en una mayor intensidad de los pro-cesos erosivos Ello limita el desarrollo del suelo y el establecimiento de la vegetacioacuten dificultando los procesos de restauracioacuten ecoloacutegica (veacuteanse capiacutetu-los sobre suelo y vegetacioacuten)

Estos procesos son particularmente severos en am-bientes de clima mediterraacuteneo semiaacuterido donde el

exceso de escorrentiacutea dificulta mucho su control y manejo Y se traduce en una baja disponibilidad hiacute-drica para las plantas lo que condiciona extraordina-riamente su germinacioacuten y establecimiento (Bochet et al 2007a)

Uno de los efectos maacutes evidentes de la erosioacuten hiacutedri-ca sobre los desmontes de carreteras y ferrocarriles es la emisioacuten de sedimentos desde los mismos que se acumulan a su pie o en las distintas superficies colectoras pavimentadas o no (Figura 8) Estos fe-noacutemenos si bien en la mayoriacutea de los casos no constituyen un riesgo para la seguridad vial siacute que afectan con frecuencia a bienes y servicios y supo-nen uno de los principales costes de mantenimiento de las infraestructuras lineales Por otro lado algu-nos avances e inversiones relevantes en las viacuteas como puede ser el uso de pavimentos o asfaltos permeables o de nuevos materiales pueden fraca-sar como consecuencia del efecto impermeabilizante que tienen las emisiones de materiales finos proce-dentes de la erosioacuten de los taludes transportados hasta alliacute por la accioacuten del agua o del viento

Figura 8 Acumulacioacuten de sedimentos procedentes de un desmonte que praacutecticamente colmata una cuneta (Foto JF Martiacuten Duque)

Si la erosioacuten en los taludes se convierte en el proceso dominante la restauracioacuten se veraacute com-prometida Se puede afirmar que sin un lsquomanejorsquo adecuado de la dinaacutemica superficial de los talu-des que proporcione a los mismos una estabilidad geomorfoloacutegica suficiente la mayoriacutea de los planes de restauracioacuten y de revegetacioacuten estaacuten abocados al fracaso (Figura 9)

A

B

D

E

C

todo en el caso de la construccioacuten de desmontes Asiacute por ejemplo los procesos de excavacioacuten ori-ginan procesos de lsquodescompresioacutenrsquo (descompac-tacioacuten y lsquoesponjadorsquo en los sustratos expuestos) como resultado de la disminucioacuten brusca de las presiones litostaacuteticas confinantes lo que favorece su fragmentacioacuten e inestabilidad Este fenoacutemeno es muy evidente cuando se excavan macizos ro-cosos Y si se construyen desmontes sobre rocas lsquoblandasrsquo los acabados lsquoestaacutendarrsquo suelen generar superficies lisas y compactadas lo que tiene como consecuencia innumerables efectos limitantes para la restauracioacuten (como pe una erosioacuten hiacutedrica se-vera) los cuales se desarrollan en el epiacutegrafe 2a de este capiacutetulo

b Modificacionesdelascondicionesgeomorfoloacutegicasehidroloacutegicasdelentorno

La consecuencia hidroloacutegica maacutes evidente de la construccioacuten de infraestructuras lineales es lo que se conoce como lsquoefecto barrerarsquo Los trazados de carreteras y ferrocarriles se convierten asiacute en toda una red de barreras hidroloacutegicas longitudinales que modifican la dinaacutemica hidroloacutegica superficial y subterraacutenea previa Ello produce la intercepcioacuten desviacioacuten y descarga concentrada de la escorren-tiacutea Las cunetas interceptan y desviacutean la escorren-tiacutea local que finalmente es liberada de manera concentrada en los colectores que constituyen los drenajes de las infraestructuras La Figura 6 ilustra graacuteficamente este efecto

Figura 6 Izquierda ejemplo de escorrentiacutea sin infraestructura lineal derecha ejemplo de la misma escorrentiacutea con infraestruc-tura lineal Redibujado a partir de un esquema de Lenore Fahrig (ineacutedito)

Otro efecto bien conocido es la formacioacuten de enchar-camientos debidos a ese mismo lsquoefecto barrerarsquo en este caso maacutes bien lsquoefecto presarsquo que ocasiona la infraestructura al interceptar las liacuteneas de flujo de circulacioacuten hidroloacutegica (tanto superficial como sub-terraacutenea Figura 7)

Carretera

Desaguumle

Escorrentiacutea

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Figura 9 Deslizamientos superficiales del terreno en desmontes de una autopista que desbaratan las actuaciones de revegetacioacuten realizadas sobre ellos (Foto JF Martiacuten Duque)

b Efectosoff-site

Constituyen probablemente las consecuencias maacutes adversas y menos estudiadas y abordadas desde un punto de vista teacutecnico y de investigacioacuten precisa-mente por situarse lsquofuerarsquo del aacutembito de las carre-teras y los ferrocarriles La mayor parte de estos impactos se debe al efecto que tienen las infraes-tructuras lineales interceptando desviando y con-centrando los flujos de escorrentiacutea y sedimentos de su entorno pero tambieacuten procedentes del aacutembito de las propias viacuteas y taludes y emitiendo los mismos de manera concentrada

Un impacto comuacuten sobre el entorno consiste en la formacioacuten de caacutercavas a la salida de los drenajes de las infraestructuras (Figuras 10 y 11) Las principales causas de formacioacuten de estas morfologiacuteas erosivas se deben a la concentracioacuten de flujos superficiales a partir de los sistemas de desaguumle que liberan de manera concentrada el drenaje de cuencas que han incrementado su aacuterea (Montgomery 1994 Nyssen et al 2002) (Figura 10) Pero tambieacuten al evacuar siempre de manera concentrada la escorrentiacutea generada en el interior de las construcciones y su entorno (Figura 11)

La formacioacuten de estas caacutercavas pero tambieacuten la emisioacuten de sedimentos que tiene lugar a partir de ellas afectan de manera negativa a la calidad de los suelos del entorno de las infraestructuras por ate-rramiento de los perfiles de suelo feacutertil en zonas de depoacutesito produciendo una inversioacuten edaacutefica Todo ello supone una merma de su calidad y capacidad agriacutecola forestal y ecoloacutegica

El efecto barrera o presa y el desaguumle repentino de escorrentiacutea a traveacutes de colectores puede dar lu-gar a inundaciones con efectos catastroacuteficos aguas abajo La conjuncioacuten del efecto barrera y de un funcionamiento deficiente de los desaguumles en la carretera M-45 fue una de las hipoacutetesis considera-das en unas inundaciones ocurridas en septiembre de 2008 en el municipio madrilentildeo de Coslada con resultado de una persona muerta y considerables dantildeos econoacutemicos

El caso extremo de estas situaciones tiene lu-gar cuando se produce una rotura de terraplenes que han represado la escorrentiacutea lo que puede de nuevo tener efectos desastrosos A modo de ejemplo en septiembre de 1999 se produjo el desmoronamiento de un tramo de 200 metros de terrapleacuten del ferrocarril Villalba-Aacutevila (entre sus puntos kilomeacutetricos 99 y 100) que actuoacute como presa en un aguacero Ello tuvo graves secuelas

aguas abajo (en la poblacioacuten de El Herradoacuten) e interrumpioacute el traacutefico ferroviario entre Madrid y el noroeste peninsular durante casi un mes Este suceso asiacute como otros similares se describen en detalle en Diacuteez (2003)

Finalmente un impacto claramente adverso consiste en la emisioacuten de escorrentiacutea pero sobre todo de sedimentos a la red fluvial situada en el entorno de las infraestructuras Y es que los sedimentos pro-cedentes del aacutembito de estas construcciones llegan con mucha frecuencia a las redes hidrograacuteficas maacutes cercanas ocasionando un claro impacto sobre los sistemas fluviales (que variacutean su morfologiacutea y dinaacute-mica) y sobre los ecosistemas acuaacuteticos Aunque en Espantildea faltan estudios en este sentido todo parece indicar que las emisiones a los cursos fluviales des-de taludes de carreteras y ferrocarriles pueden supo-ner una de las principales fuentes de sedimentos en muchas cuencas hidrograacuteficas

Figura 10 Formacioacuten de una caacutercava a la salida de una bajante so-bre un terrapleacuten Las cunetas de una autoviacutea interceptan y desviacutean la escorrentiacutea local que finalmente es liberada de manera concen-trada en este punto con el consiguiente efecto erosivo (Foto JF Martiacuten Duque)

Figura 11 Formacioacuten de una caacutercava a la salida de una cuneta que recoge la escorrentiacutea procedente del aacutembito de una autopista (viacuteas y desmontes) (Foto JF Martiacuten Duque)

V LA ADOPCIOacuteN DE SOLUCIONES DESDE ENFOQUES GEOMORFOLOacuteGICOS E HIDROLOacuteGICOS

1 Hacia una integracioacuten ambiental eficiente en las fases de planificacioacuten y disentildeo

Maacutes allaacute de la adopcioacuten de medidas correctoras localizadas estaacute ampliamente demostrado que es en las fases de planificacioacuten y disentildeo donde puede realizarse la mejor integracioacuten ambiental posible de las infraestructuras lineales de transporte Asiacute las cosas si hubiera que realizar una recomendacioacuten general esta consistiriacutea en retomar la praacutectica del lsquoanaacutelisis del lugarrsquo que ha caracterizado a los mejo-res proyectos de ingenieriacutea a lo largo de la historia utilizando precisamente el ingenio humano Y ello frente a la praacutectica dominante que tiende a impo-ner unas soluciones estaacutendar para cualquier esce-nario al margen de las caracteriacutesticas especiacuteficas del territorio

Una correcta integracioacuten de los factores geoloacutegi-cos geomorfoloacutegicos e hidroloacutegicos debe evitar o minimizar la posibilidad de que las infraestructuras

sean afectadas por procesos geoloacutegicos y geomor-foloacutegicos activos (no relacionados con la infraes-tructura) Todo ello mediante un anaacutelisis de peligro-sidad y riesgo (Ayala y Olcina 2002) que ayude a no situar las infraestructuras en lugares inadecuados desde esta perspectiva Y no solo con el objetivo de reducir la probabilidad de peacuterdidas humanas sino con la finalidad de reducir los costes econoacutemi-cos posteriores en obras de defensa y en medidas correctoras

Para ello se deberiacutean identificar y evaluar aacutereas susceptibles de estar sujetas a procesos de ero-sioacuten (Figura 12) deslizamientos terremotos sub-sidenciashellip u otros peligros geoloacutegicos que supon-gan una amenaza seria a las infraestructuras y que por tanto hagan incompatible su ubicacioacuten en esas zonas

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Figura 12 Bloque diagrama idealizado que muestra los dantildeos producidos a la autopista 140 (en el suroeste de Colorado Estados Unidos) en un tramo en el que atraviesa un fondo de valle muy afectado por procesos de piping y erosioacuten en caacutercavas En Parker y Jenne (1967)

de terrenos afectados por mineriacutea de superficie En Nicolau (2003) y en Martiacuten Duque et al (2010) puede encontrarse una siacutentesis de las distintas aproxima-ciones y de la literatura internacional maacutes relevante sobre estos temas Bugosh (2006) describe la que puede considerarse una de las aproximaciones maacutes avanzadas a nivel mundial a este respecto (meacutetodo GeoFluv y software Natural Regrade)

Tanto las bermas de tierra (earth berms) aunque se construyen fundamentalmente para compensar movimientos de tierra y como pantallas acuacutesticas o visuales como las escombreras podriacutean incorporar tambieacuten criterios geomorfoloacutegicos e hidroloacutegicos en su disentildeo y construccioacuten en lugar de centildeirse a unas pocas tipologiacuteas constructivas muy baacutesicas y estan-darizadas a nivel global Todo ello no con un fin exclusivamente visual o esteacutetico sino funcional tra-tando de garantizar la maacutexima integracioacuten ambien-tal y su estabilidad geomorfoloacutegica a largo plazo El libro de Schor y Gray (2007) ofrece un meacutetodo esencialmente visual sobre las posibilidades de di-sentildeo de estas formas del terreno mientras que en Bugosh (2006) se puede encontrar un enfoque maacutes funcional basado en principios de la geomorfologiacutea fluvial

Finalmente si bien es cierto que el proceso de cons-truccioacuten de infraestructuras lineales puede destruir o dantildear elementos geoloacutegicos y geomorfoloacutegicos de intereacutes no es menos cierto que este proceso cons-tructivo puede crear exposiciones y afloramientos de enorme utilidad donde antes no existiacutean No identi-ficar los puntos y lugares de intereacutes geoloacutegico que se generan con frecuencia durante los procesos de construccioacuten de carreteras y ferrocarriles constituye uno de los errores maacutes habituales de esta activi-dad humana El desintereacutes hacia este aspecto suele afectar tambieacuten a las fases de restauracioacuten basadas exclusivamente en muchos casos en tratar de es-tablecer una cubierta vegetal a toda costa lo que puede destruir elementos geoloacutegicos de gran valor educativo cientiacutefico y turiacutestico

En Estados Unidos existe una amplia tradicioacuten en la identificacioacuten y puesta en valor mediante ma-teriales interpretativos (paneles miradores y hasta centros de visitantes) de estructuras y cortes geo-loacutegicos de gran valor que quedan expuestos a partir de la construccioacuten de infraestructuras lineales Uno de los ejemplos maacutes emblemaacuteticos lo constituye el corte geoloacutegico conocido como Sideling Hill Road Cut En este caso las obras de una autopista deja-ron expuesta de manera espectacular la estructura de un sinclinal colgado en una de las alineaciones

montantildeosas de los Apalaches (Figura 13) El valor de esta exposicioacuten es tal que cuenta con un pequentildeo centro de visitantes y con abundante material inter-pretativo ad hoc constituyendo un recurso didaacutectico y turiacutestico indudable

Figura 13 Superior fotografiacutea aeacuterea oblicua del Sideling Hill Road Cut El corte realizado por la autopista permite reconocer la estruc-tura interior de un sinclinal colgado el cual forma la alineacioacuten montantildeosa de la imagen (Foto Maryland Geological Survey 1998) Inferior detalle del corte y de la estructura geoloacutegica desde una plataforma habilitada para su observacioacuten (Foto JF Martiacuten Duque)

En el Reino Unido el corte Claverley Road Cutting estaacute reconocido como patrimonio geoloacutegico rele-vante para el estudio de ambientes fluviales del Triaacutesico (Ellis 1996) Y en Espantildea si bien existen algunos antecedentes de intereacutes lo cierto es que estos auacuten tienen un caraacutecter aislado y que apenas existe tradicioacuten en este sentido Es el caso del lsquoplie-gue Zaleskirsquo recogido incluso en la guiacutea metodo-loacutegica para la elaboracioacuten de estudios de impacto ambiental de carreteras y ferrocarriles (MOPU 1989 paacuteg 117) Un ejemplo sobresaliente lo constituye el trabajo realizado en torno al tuacutenel ordoviacutecico de Ribadesella (perteneciente a la Autoviacutea del Cantaacute-brico) En eacutel la integracioacuten entre el desarrollo de las obras las investigaciones cientiacuteficas y la divul-gacioacuten de la informacioacuten obtenida (con una expo-sicioacuten permanente en el Museo El Carmen de Ri-badesella) constituye un ejemplo modeacutelico (veacutease

Una de las recomendaciones maacutes efectivas para in-tegrar correctamente los factores geomorfoloacutegicos e hidroloacutegicos consiste en garantizar una miacutenima afec-cioacuten a la hidrologiacutea superficial y subterraacutenea a escala de paisaje aumentando siempre en la medida de lo posible la lsquopermeabilidadrsquo de los corredores de las infraestructuras Por ejemplo mediante la cons-truccioacuten del mayor nuacutemero posible de viaductos y drenajes

Dentro de este epiacutegrafe de lsquointegracioacuten ambientalrsquo merecen un comentario especiacutefico las constantes obras de lsquomejorarsquo (ampliar anchura arcenes reducir curvashellip) de carreteras locales muy poco transita-das o que discurren por espacios naturales o rurales remotos Bajo el argumento de garantizar un trans-porte seguro y eficiente lsquoen cualquier lugarrsquo es fre-cuente modificar severamente la topografiacutea local ex-poner sustratos no meteorizados que ocasionan un impacto ecoloacutegico y paisajiacutestico significativo verter derrubios a cauces fluviales y afectar a formaciones geomorfoloacutegicas relevantes o a elementos esencia-les de paisajes rurales valiosos (como vallados cen-tenarios de piedra o aacuterboles) Todo ello origina una peacuterdida del caraacutecter del paisaje en el que se insertan las propias viacuteas y del cual forman parte de manera indisoluble Asiacute se reconoce en la catalogacioacuten de

lsquocarreteras esceacutenicasrsquo en paiacuteses como Estados Uni-dos (scenic byways) o en la consideracioacuten que tie-nen estas viacuteas en la mayoriacutea de los paiacuteses del norte de Europa y de Ameacuterica en los que no cabe hablar de una falta de preocupacioacuten por la seguridad de las personas Su forma de actuar en estos casos podriacutea tomarse como ejemplo muy alejado de demasiadas praacutecticas que ponen de manifiesto una escasiacutesima sensibilidad hacia el territorio que se transforma

Pasando ya a una escala de lsquotaludrsquo se deberiacutean con-siderar las dinaacutemicas geomorfoloacutegica e hidroloacutegica locales desde su anaacutelisis y comprensioacuten como fac-tores esenciales en el disentildeo y construccioacuten de des-montes y terraplenes Ello podriacutea recomendar en la medida de lo posible el remodelado de los taludes variando sus perfiles rectiliacuteneos por otros geomor-foloacutegicamente maacutes estables (de topografiacutea normal-mente compleja) seguacuten dicte el anaacutelisis geomorfo-loacutegico local

Los preacutestamos vertederos y bermas de tierra de-beriacutean merecer un tratamiento especiacutefico dentro de la integracioacuten ambiental de las infraestructuras li-neales Para la restauracioacuten de preacutestamos pueden seguirse en realidad los mismos criterios que rigen las mejores praacutecticas para la restauracioacuten ecoloacutegica

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Gutieacuterrez Marco y Bernaacuterdez 2003) Sin embargo situaciones como la del tuacutenel ordoviacutecico son auacuten muy aisladas en nuestro paiacutes lo que lleva a des-aprovechar con demasiada frecuencia toda una serie de oportunidades educativas cientiacuteficas y tu-riacutesticas que se generan con la apertura de infraes-tructuras lineales

Figura 14 Portada del libro Roadside Geology of Arizona Los libros de esta serie pueden encontrarse faacutecilmente en la mayoriacutea de las aacutereas y zonas de servicio relacionadas con el transporte por carre-tera de Estados Unidos

El coste econoacutemico que supondriacutea la adecuacioacuten de estos espacios podriacutea ser miacutenimo pues en muchos casos bastariacutea con un pequentildeo aparcamiento y un panel explicativo Una recomendacioacuten esencial a la hora de facilitar el acceso a tales lugares y permitir asiacute un posible aprovechamiento lsquoculturalrsquo de estas exposiciones es la de garantizar la seguridad de las personas que puedan examinar los afloramien-tos lo cual deberiacutea ser primordial A modo de co-mentario final sobre la relacioacuten entre las carreteras y los lugares de intereacutes geoloacutegico y geomorfoloacutegi-co merece la pena destacar la iniciativa Roadside

permeables mediante alguno de los muacuteltiples siste-mas existentes (como tubos perforados) o mediante el uso de vegetacioacuten que cumpla la misma funcioacuten lo cual estaacute menos ensayado

Otra praacutectica beneficiosa consiste en aumentar la rugosidad de los desmontes Pero mientras que en demasiados paiacuteses incluido Espantildea auacuten se rei-vindica la construccioacuten de taludes con apariencia lisa que otorguen una (falsa) impresioacuten de lsquobuen acabadorsquo y de un trabajo lsquobien hechorsquo se puede citar que nada menos que en 1978 Wright y otros autores alertaban categoacutericamente sobre esa praacutec-tica perjudicial la cual suele conducir a fallos en el establecimiento de la vegetacioacuten Seguacuten sentildealan Wright et al (1978) las superficies rugosas otorgan una apariencia lsquofearsquo al profano pero favorecen la infiltracioacuten de agua y ayudan a recolectar semillas y nutrientes lo que acelera el establecimiento de la vegetacioacuten y por consiguiente disminuye la emi-sioacuten de aguas y sedimentos a la red de drenaje Un trabajo mucho maacutes reciente (Petersen et al 2004) tambieacuten pone de manifiesto coacutemo los lechos rugo-sos favorecen significativamente el establecimiento de la vegetacioacuten

Este aspecto revela una constante contradiccioacuten o una falta de claridad de objetivos a la hora de aco-meter muchos proyectos de restauracioacuten en los que no estaacute claro desde el principio el aspecto y funcioacuten que debe tener un talud de una infraestructura li-neal Las posturas y enfoques que van desde una aproximacioacuten meramente esteacutetica (proporcionar la maacutes agradable experiencia visual para el conductor) hasta otra maacutes ecoloacutegica como la que se propone en este manual no han logrado una conciliacioacuten En esta discusioacuten no habriacutea que obviar que una mayor funcionalidad ecoloacutegica tiene unas mayores posibili-dades de integracioacuten visual

La reduccioacuten de la escorrentiacutea y el incremento de la infiltracioacuten mediante procesos de descompacta-cioacuten o aumento de la rugosidad aparecen descritos como medidas efectivas en trabajos como Gray y Sotir (1996) o Hogan y Drake (2009)

Otras medidas de lsquosentido comuacutenrsquo pero que la di-naacutemica de las obras puede dificultar consisten en planificar las actividades de construccioacuten y restau-racioacuten en funcioacuten de la meteorologiacutea del lugar de modo que se minimicen los procesos erosivos y en reducir el tiempo de exposicioacuten entre la construc-cioacuten y la restauracioacuten de desmontes y terraplenes de manera que se eviten o minimicen los procesos erosivos (Figura 15)

Figura 15 Erosioacuten hiacutedrica muy severa en terraplenes de una au-toviacutea La paralizacioacuten de las obras impidioacute el extendido de tierra vegetal y la revegetacioacuten durante un largo periodo de tiempo (Foto JF Martiacuten Duque)

3 Correccioacuten de los efectos off-site

La adopcioacuten de un enfoque o aproximacioacuten ecoloacutegi-ca que permita minimizar muchos de los efectos am-bientales maacutes habituales que tiene la construccioacuten de carreteras y ferrocarriles deberiacutea partir de un anaacute-lisis y comprensioacuten de la dinaacutemica geomorfoloacutegica e hidroloacutegica que tiene el territorio sobre el que se impone la infraestructura En el caso de la hidrolo-giacutea las estimaciones de voluacutemenes de escorrentiacutea y de sus caudales punta aunque imprescindibles para disentildear los drenajes deberiacutean completarse con anaacutelisis sobre su capacidad de erosioacuten transporte y sedimentacioacuten Una comprensioacuten y anticipacioacuten de los factores geomorfoloacutegicos e hidroloacutegicos implica-dos evitariacutean muchas de las habituales letaniacuteas de problemas que surgen tras la fase de construccioacuten

Para la correccioacuten de los efectos geomorfoloacutegicos e hidroloacutegicos off-site la experiencia y la literatura destacan los muacuteltiples beneficios que tiene aumen-tar la lsquopermeabilidadrsquo hidroloacutegica y territorial de las infraestructuras (por ejemplo mediante la construc-cioacuten de viaductos) Un caso interesante lo constitu-yen toda una serie de proyectos destinados a mejo-rar la permeabilidad de la autoviacutea AP-7 frente a las avenidas

Se deberiacutea asimismo evitar incrementar excesi-vamente el aacuterea de las cuencas hidrograacuteficas que drenan hacia los distintos colectores que atraviesan las infraestructuras impidiendo en la medida de lo posible la desviacioacuten de escorrentiacutea desde unas cuencas hidrograacuteficas a otras Tambieacuten se deberiacutea limitar la distancia entre los sistemas de cunetas y

Geology Series Esta iniciativa procedente de nue-vo de Estados Unidos consiste en una serie de libros editados para cada estado (Figura 14) en los que se explican e interpretan paisajes actuales y pasados sobre la base de lugares de intereacutes si-tuados lsquoal lado de las carreterasrsquo Las carreteras se convierten asiacute en el elemento estructurante y organizador de los contenidos

2 Correccioacuten de los efectos on-site

A diferencia de la restauracioacuten de otros espacios en los que ha habido una modificacioacuten simultaacutenea del sustrato del suelo y de la vegetacioacuten (por ejemplo mineriacutea) en los taludes de las infraestructuras linea-les no es posible la reconstruccioacuten de una nueva topografiacutea lo cual impone toda una serie de limi-taciones de primer orden a la restauracioacuten En todo caso siacute que es posible efectuar un remodelado y suavizado de los perfiles rectiliacuteneos

Pero lo cierto es que en un contexto lsquoglobalrsquo ape-nas se llevan a cabo variaciones morfoloacutegicas de los taludes disentildeados con criterios geoteacutecnicos de modo que el principal objetivo de la restauracioacuten va dirigido a revegetar las superficies directamente resultantes de la construccioacuten de taludes Todo ello a pesar de que como ya se ha comentado existan demasiados ejemplos de fallos en intentos de re-vegetacioacuten de estos espacios sobre todo en des-montes sobre rocas no consolidadas bajo climas mediterraacuteneos semiaacuteridos

Para prevenir efectos geomorfoloacutegicos e hidroloacutegi-cos severos en los propios taludes de las infra-estructuras lineales la literatura recoge como una buena praacutectica ciertamente esencial evitar la en-trada de escorrentiacutea exterior (run-on) hacia el talud Todo ello mediante medidas como la construccioacuten de cunetas perimetrales efectivas (cut-off drains) Sin embargo una vez que el flujo se concentra en estas cunetas el potencial erosivo resultante de liberar dicha escorrentiacutea (y el de infiltracioacuten si no estaacuten pavimentadas) se incrementa considerable-mente Por este motivo su conduccioacuten hacia el sistema de drenajes y cunetas cuando el disentildeo lo recomiende deberiacutea realizarse mediante los dis-tintos tipos de bajantes que estaacuten disentildeados para disipar la energiacutea

La prevencioacuten de los efectos derivados de la existen-cia de surgencias en los desmontes puede acome-terse desde meacutetodos tradicionales y contrastados tales como drenar de manera controlada los niveles

Lugar de intereacutes geoloacutegico excepcional (cabalga-miento o falla inversa) expuesto como consecuencia de unas obras de ampliacioacuten de la carretera N-110 en el borde norte del Sistema Central (proximidades de la localidad de Villacastiacuten) El material grisaacuteceo situado sobre la liacutenea oblicua (falla) son granitoides del Paleozoico que lsquocabalganrsquo sobre los materiales anaranjados y ocres correspondientes a arenas arcoacutesicas del Cenozoico (Foto Alberto Carrera) En Diacuteez y Martiacuten Duque (2005)

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alcantarillas con el objetivo de reducir la longitud de recorrido de la escorrentiacutea

Otras medidas efectivas consisten en dirigir el desaguumle de los drenajes hacia zonas con una bue-na cubierta vegetal bien existente o bien creada mediante canales revegetados O bien canalizar las emisiones de escorrentiacutea y sedimentos que

atraviesan o proceden de las infraestructuras hasta balsas de decantacioacuten o retencioacuten temporal tanques de tormentas diques de tierra o gaviones o simi-lares a la salida de los drenajes (Figura 16) Op-cionalmente estas estructuras pueden incorporar un desaguumle controlado y gradual de la escorrentiacutea todo ello con el objetivo de laminar picos de avenidas y de evitar posibles roturas o colmataciones raacutepidas

El siguiente caso (descrito en detalle en Diacuteez Herrero et al 2009) puede servir para ilustrar la dicotomiacutea permanente que existe entre una forma convencional de abordar el tratamiento de taludes de carreteras (el ya referido lsquobusiness as usualrsquo) y la existencia de otras posibilidades apenas exploradas que podriacutean conseguir solucionar problemas de manera maacutes efi-ciente y con una mayor integracioacuten ambiental

La carretera SG-312 denominada localmente lsquoCuesta de los Hoyosrsquo consiste en una viacutea de doble carril que bordea la ciudad histoacuterica de Segovia por el suroeste constituyendo una de las principales viacuteas de comunicacioacuten de su entorno Dicha carretera discurre a modo de escaloacuten entre el fondo de un pequentildeo valle (del arroyo Clamores) y una ladera desarrollada sobre rocas carbonaacuteticas

Las obras de construccioacuten de esta carretera y de sus sucesivos arreglos y ensanches han conforma-do un escarpe continuo en uno de las maacutergenes de la viacutea Este escarpe casi vertical ha favorecido la ocurrencia de sucesivos procesos de caiacutedas des-prendimientos vuelcos y colapsos de rocas cuya interferencia con el traacutefico rodado ha sido muy fre-cuente De hecho ha existido aquiacute desde antiguo la caracteriacutestica sentildeal de traacutefico que indica lsquopeligro por desprendimientosrsquo En el antildeo 2003 la circulacioacuten por esta carretera estuvo cortada debido a las obras de estabilizacioacuten de los taludes como consecuencia de dos importantes desprendimientos de rocas ocurri-dos los meses de mayo y agosto de ese mismo antildeo uno de los cuales movilizoacute maacutes de 20 toneladas de rocas Tras ese desprendimiento y cuando apenas habiacutean transcurrido 25 diacuteas de su apertura la carre-tera tuvo que ser cortada de nuevo el 31 de agosto de 2003 tras otro desprendimiento

La solucioacuten de estabilizacioacuten consistioacute en aplicar a todo el cortado rocoso distintos tipos de malla talud (Figura 17) cuyo importe total fue de 900000 euros Si bien la medida correctora puede ser efectiva para pequentildeos desprendimientos no lo es para otros de mayor entidad (puesto que la solucioacuten no logra es-tabilizar grandes bloques inestables como tambieacuten puede verse en la Figura 17) Al mismo tiempo se echa en falta aquiacute un tratamiento maacutes adaptado al entorno tan singular en el que se integra la viacutea con vistas reciacuteprocas entre la carretera y el borde suroeste de la ciudad histoacuterica (que es Patrimonio de la Humanidad desde 1985) La singularidad de

este enclave se completa por la circunstancia de que el talud objeto de tratamiento incluye cuevas apro-vechadas como necroacutepolis que fueron el cemente-rio judiacuteo de la ciudad De hecho la Fiscaliacutea de la Audiencia Provincial de Segovia llegoacute a incoar dili-gencias informativas para tener conocimiento de la posible afeccioacuten al medio ambiente de estas obras Desde nuestro punto de vista una accioacuten lsquocorrec-torarsquo maacutes sensible y ecoloacutegica maacutes particularizada y con un enfoque en el que hubiera predominado la integracioacuten ambiental de la obra en su entorno podriacutea haber propuesto al menos en algunos sec-tores la retirada y desmonte de todos aquellos sec-tores del talud que mostrasen mayor inestabilidad eliminando el riesgo pero dejando al descubierto afloramientos naturales de roca lsquosanarsquo (en la liacutenea de la solucioacuten lsquotalud Royalrsquo que se expondraacute maacutes adelante) En este sentido la exposicioacuten de super-ficies coincidentes con diaclasas existentes habriacutea favorecido un aspecto maacutes lsquoenvejecidorsquo de manera natural del desmonte conservando asiacute el caraacutecter singular de este entorno

Figura 17 Tratamiento con malla-talud efectuado en la Cuesta de Los Hoyos (Segovia) (Foto Andreacutes Diacuteez)

Figura 16 Izquierda ejemplo de una balsa de decantacioacuten de sedimentos y de contencioacuten de vertidos accidentales conectada al sistema de drenaje de la autopista Radial 4 (Madrid) En la imagen pueden observarse ademaacutes de la infraestructura lineal la bajante desde el terrapleacuten la cuneta que conduce la escorrentiacutea y los sedimentos a la balsa el canal de entrada la balsa y el vertedero de la balsa a la red fluvial del entorno (arroyo Salinas) Derecha detalle de la misma balsa en el que se aprecian mejor alguno de los elementos que la componen el canal de entrada la reja de desbaste la balsa el canal de vertido y el arroyo Salinas (al fondo) (Fotos Javier Martiacutenez de Castilla Colomer Ferrovial-Agromaacuten SA)

La literatura especializada propone evitar cons-truir cunetas con un disentildeo convencional con perfil lsquoen Vrsquo y construirlas con fondo plano so-bre todo si no estaacuten pavimentadas ya que las primeras concentran y aceleran el flujo de agua y favorecen la erosioacuten bien en la propia cuneta (si no estaacute cementada) bien cuando se libera la es-correntiacutea hacia fuera del aacutembito de la infraestruc-tura Otras recomendaciones auacuten maacutes completas incluiriacutean disentildear las cunetas sobre la base de principios de la geomorfologiacutea fluvial (Bugosh

2006) y utilizar pavimentos permeables siempre previendo sus posibles efectos

Como siacutentesis podriacutea decirse que habriacutea que reducir al maacuteximo posible la intercepcioacuten concentracioacuten y desviacioacuten de la escorrentiacutea producida por la cons-truccioacuten de carreteras Ademaacutes la escorrentiacutea eva-cuada deberiacutea distribuirse espacial y temporalmente buscando siempre incrementar la infiltracioacuten y evi-tando dirigir los desaguumles hacia laderas sin protec-cioacuten frente a la erosioacuten hiacutedrica

VI UN EJEMPLO ILUSTRATIVO LAS LIMITACIONES DE LAS SOLUCIONES lsquoESTAacuteNDARrsquo

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La confirmacioacuten del fracaso de una solucioacuten que no estaacute adaptada a paliar la causa del problema se ha puesto de manifiesto con la ocurrencia de nuevos desprendimientos recientes ocurridos el 22 de no-viembre de 2010 que han motivado un nuevo cierre de la viacutea

Muy cerca de la citada carretera SG-312 aparece otro ejemplo de lsquoestabilizacioacutenrsquo de un escarpe rocoso que ilustra incluso mucho maacutes claramente que el ante-rior la dificultad para adoptar otro tipo de solucio-nes que no sean las rutinarias

En este caso se trata de unos cantiles rocosos de la misma naturaleza que los recieacuten descritos que a modo de anfiteatro natural circundan el Santuario de La Fuencisla (denominadas Pentildeas Grajeras) tam-bieacuten en el entorno de la ciudad histoacuterica de Segovia Estos escarpes han sufrido al menos cinco despren-dimientos de gran entidad en los uacuteltimos 500 antildeos (Diacuteez Herrero et al 2009) lo que indica un periodo de retorno de un evento de gran magnitud de en torno a 100 antildeos El suceso maacutes reciente tuvo lugar la madrugada del 7 de abril de 2005 cuando al me-nos dos mil toneladas de roca se desprendieron de las Pentildeas Grajeras destruyendo el edificio anexo al Santuario de la Fuencisla e hiriendo a tres religiosas que se encontraban dentro

Dentro de estas mismas Pentildeas Grajeras toda una serie de desprendimientos de menor entidad afectan tambieacuten de modo recurrente a la carretera que dis-curre a su pie (carretera SG-310 o carretera de Areacute-valo) Asiacute unos pocos diacuteas despueacutes del suceso del 7 de abril de 2005 se produjo un nuevo desprendi-miento de rocas en una zona muy proacutexima En este caso las rocas caiacutedas alcanzaron a un vehiacuteculo que pasaba por la carretera en ese momento Con poste-rioridad otros desprendimientos (ocurridos el 13 de mayo de 2008 y el 20 de julio de 2008) obligaron de nuevo a cortar algunas zonas a la circulacioacuten de personas y vehiacuteculos

En este caso se puede ser auacuten mucho maacutes criacutetico con la actuacioacuten de estabilizacioacuten y restauracioacuten que se produjo sobre las Pentildeas Grajeras con poste-rioridad al gran desprendimiento del 7 de abril de 2005 Tras el desprendimiento un gran bloque que-doacute semisuspendido separado del macizo rocoso

Tabla 1 Efectos de las diferentes soluciones teacutecnicas de actuacioacuten en Pentildeas Grajeras (Segovia)

EFECTOS QUE HUBIERA TENIDO DESMONTAR EL GRAN BLOQUE INESTABLE

EFECTOS DE LA INTERVENCIOacuteN REALIZADA BULONADO + GUNITA

Apariencia natural manteniendo la calidad visual Hubiera quedado un escarpe rocoso poco meteorizado que se habriacutea integrado progresivamente en el conjunto del cortado

Peacuterdida de valores esteacuteticos Aspecto artificial de ldquocualquier desmonte de carreterardquo en un entorno de calidad visual muy alta

Hubiera mantenido intactos los valores que hacen de esta localizacioacuten un enclave singular

La singularidad del enclave se mantiene pero se produce una peacuterdida clara del caraacutecter del lugar

Se habriacutean mantenido los procesos geomorfoloacutegicos hidroloacutegicos y ecoloacutegicos (mantenimiento del haacutebitat natural para distintas especies rupiacutecolas y de la biodiversidadhellip)

No mantiene los procesos geomorfoloacutegicos hidroloacutegicos y ecoloacutegicos Sistema artificial sin flujos naturales ni haacutebitats (gunitado)

Hubiera sido una solucioacuten resiliente y estable No es una solucioacuten ni resiliente ni estable

No hubiera requerido mantenimiento (mucha mayor estabilidad) Maacutes barato

Requiere mantenimiento (el problema queda lsquocongeladorsquo) Maacutes caro

VII EJEMPLOS DE EacuteXITO (O DE COacuteMO SERAacute EL FUTURO)

por una grieta de 6 cm de anchura y de 15 m de longitud con riesgo de afectar al Santuario Tras esa alarma se produjo una intervencioacuten inmediata que lsquobulonoacutersquo el bloque inestable al macizo rocoso realizaacutendose con posterioridad un tratamiento con mortero proyectado (gunitado) En nuestra opinioacuten hubiera sido mucho maacutes conveniente proceder a desmontar el gran bloque inestable lo que hubiera garantizado una gran estabilidad de la zona duran-te muchos antildeos Y hubiera permitido el afloramien-to de roca natural asegurando el mantenimiento de la calidad ecoloacutegica y visual del lugar Como miacute-nimo esta posibilidad deberiacutea haberse contempla-do como alternativa dada su viabilidad y dado que los requerimientos teacutecnicos (instalacioacuten de gruacutea) y de riesgo asumido eran similares en los dos casos Sin embargo en su lugar se procedioacute a realizar una actuacioacuten lsquoconvencionalrsquo (Figura 18) como las que se aplican en cualquier talud de carretera en un entorno de gran valor natural histoacuterico y religioso y sin duda en el paisaje maacutes sobresaliente del entorno de la ciudad de Segovia No en vano esta zona forma parte de las vistas panoraacutemicas de ma-yor calidad que se obtienen desde el mirador del Alcaacutezar vistas que se encuentran protegidas por una normativa pionera en nuestro paiacutes (del antildeo 1941) a este respecto La Tabla 1 trata de compa-rar los efectos que hubiera tenido la alternativa de desmontar el bloque inestable con respecto a la solucioacuten finalmente adoptada

Figura 18 Detalle del bulonado y gunitado elegido como solucioacuten teacutecnica para la fijacioacuten de la placa de roca contigua a la zona des-prendida (Foto Andreacutes Diacuteez)

El hecho de que la praacutectica totalidad de los taludes de infraestructuras lineales se construyan actualmente si-guiendo casi siempre los mismos meacutetodos no quiere decir que no existan ya otras propuestas y realidades que constituyen ejemplos exitosos que apuntan hacia otra manera de hacer las cosas Estas experiencias auacuten muy minoritarias y tildadas de lsquopoco realistasrsquo o lsquomuy carasrsquo (lo cual contraargumentaremos) muestran lo que seraacuten probablemente los procedimientos de disentildeo y construccioacuten de la mayor parte de los taludes de infraestructuras lineales en el futuro

1 Maacutexima estabilidad e integracioacuten ambiental de desmontes rocosos el talud Royalreg

La praacutectica constructiva actual de desmontes de in-fraestructuras lineales sobre macizos rocosos puede considerarse bastante lsquotraumaacuteticarsquo para el paisaje afec-tado dado que lsquobiselarsquo por igual todo tipo de rocas y formas del terreno Los nuevos desmontes suelen tener un gran impacto visual y ecoloacutegico al tiempo que son fuente de todo tipo de inestabilidades Fren-te a esta manera ndashcasi uacutenicandash de observar la realidad de estos espacios el talud Royalreg (httpwwwgenie-geologiquefr) creado y patentado por el geoacutelogo franceacutes Paul Royal propone un meacutetodo que consigue

simultaacuteneamente otorgar la maacutexima estabilidad a los desmontes rocosos de infraestructuras lineales y con-seguir una extraordinaria integracioacuten visual y ecoloacutegica

El meacutetodo consiste en analizar la evolucioacuten geomor-foloacutegica que sufren las mismas rocas objeto de corte en laderas de paisajes del entorno que se consideran referentes e lsquoimprimirrsquo a los desmontes construidos dicha evolucioacuten desde el principio En el fondo el razonamiento es simple y realiza la si-guiente interpretacioacuten si se construyera un desmon-te rocoso sobre una localizacioacuten determinada y no se interviniera sobre eacutel (estabilizaacutendolo) durante un periodo de tiempo largo este sufririacutea una evolucioacuten geomorfoloacutegica La interpretacioacuten de esa evolucioacuten no es imposible sino perfectamente factible a partir del anaacutelisis de los referentes ya citados Sobre esta base la solucioacuten Royal lsquocomprimersquo esa evolucioacuten durante la fase constructiva y otorga al desmonte rocoso desde el principio la evolucioacuten que sufririacutea a lo largo de un periodo de tiempo dilatado El re-sultado es un talud muy estable visualmente muy atractivo y con las maacuteximas ventajas ecoloacutegicas

En siacutentesis el meacutetodo consiste en a) identificar las principales liacuteneas de discontinuidad del macizo rocoso (fallas diaclasas planos de estratificacioacuten planos de esquistosidadhellip) las cuales determinan

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la inestabilidad b) comprender los patrones de esa inestabilidad como tipo de proceso (caiacutedas o desli-zamientoshellip) y condiciones de ocurrencia c) conocer cuaacutel es la respuesta diferencial (erosiva o evolutiva) de las distintas rocas que componen un talud (por ejemplo una roca masiva puede soportar un talud vertical pero un estrato de una roca sedimentaria intercalada no) e incorporar dicha respuesta en el disentildeo

Los taludes Royal se construyen a partir de vola-duras muy dirigidas o controladas (adaptadas a la estructura de los distintos tipos de rocas) Este pro-ceso se completa mediante el desmonte particulari-zado de bloques inestables con retroexcavadora y tambieacuten de manera manual (Figura 19) El enfoque convencional interpreta que el procedimiento Royal es lsquomucho maacutes carorsquo que los meacutetodos actuales de construir desmontes pero desde aquiacute nos atrevemos a afirmar que este meacutetodo es lsquomucho maacutes baratorsquo si consideramos el ahorro que se genera con el meacuteto-do Royal tanto en costes de medidas correctoras de tipo estructural (cunetas bulones mallas empleo de gunitahellip) como en costes de mantenimiento al que estaacuten sujetos la mayoriacutea de los taludes rocosos que son afectados por infraestructuras lineales (veacutea-se a este respecto el ejemplo descrito en el apartado VI de este capiacutetulo)

Figura 19 Aspecto de un talud Royal en construccioacuten en el que se estaacuten eliminando los uacuteltimos bloques inestables de forma manual Carretera RN57 en Luxeuil Francia (Foto Paul Royal)

Como ya se ha indicado ademaacutes del beneficio eco-noacutemico a largo plazo los taludes Royal ofrecen enor-mes ventajas paisajiacutesticas y ecoloacutegicas

1 Constituyen teselas de paisaje visualmente atrac-tivas perfectamente integradas en el entorno Ello es asiacute porque ofrecen una configuracioacuten geomorfoloacutegica que es convergente (lsquonaturalrsquo coherente) con la del entorno (Figura 20) Tam-bieacuten y este destalle es esencial porque al dejar

al descubierto las discontinuidades naturales de la roca estas ya tienen un determinado grado de meteorizacioacuten lo que consigue el admirable ob-jetivo de construir un talud nuevo que ya parece lsquomuy viejorsquo por estar meteorizado (Figura 21)

Figura 20 Aspecto de un talud Royal en la carretera A20 Cahors (Francia) (Foto Paul Royal)

Figura 21 Aspecto de un talud Royal en la carretera RD 105 Loire (Francia) en el que se observa la exposicioacuten de superficies ya meteorizadas en un desmonte de reciente construccioacuten (Foto Paul Royal)

2 Se logra establecer una continuidad entre la geo-logiacutea y la geomorfologiacutea (es decir la estructura del paisaje) del entorno y los desmontes cons-truidos al evitar contactos bruscos y artificiales entre ambos sistemas

3 La configuracioacuten del desmonte ofrece las mayores ventajas ecoloacutegicas posibles al no incluir elemen-tos artificiales A su vez se maximiza la superficie total expuesta dado que son taludes lsquotridimen-sionalesrsquo que incrementan considerablemente su superficie final Auacuten maacutes como existen distintas orientaciones y pendientes se construye la base

para la existencia de una gran diversidad de haacutebi-tats Finalmente dada la ausencia de elementos artificiales y su gran estabilidad su colonizacioacuten natural por distintas especies de flora y fauna es raacutepida y espontaacutenea

El meacutetodo Royal cuenta con una ampliacutesima gama de ejemplos construidos en Francia (accesibles a traveacutes de httpwwwgeniegeologiquefr) y a fecha de 2010 con dos ejemplos en Cataluntildea carretera C-16 DrsquoAbrera a Bellver de Cerdanya y carretera C-15 en el tramo de Vilanova i la Gel-truacute ndash Vilafranca del Penedeacutes (Figura 22) Estos ejemplos son el resultado de iniciativas de gran intereacutes que llevan antildeos buscando las mejores soluciones disponibles para minimizar el impacto de las infraestructuras viarias sobre el territorio (EGAM SL 2000)

Figura 22 Aspecto de un talud Royal en construccioacuten en una autopista que atraviesa el macizo del Garraf (Cataluntildea) La Declaracioacuten de Impacto Ambiental de esta autopista puso como condicioacuten la construccioacuten de este tipo de talud en esta zona Noacutetese coacutemo las rocas de la izquierda de la imagen rocas de falla maacutes erosionables) son remodeladas formando ya una pequentildea depresioacuten en el desmonte alcanzando desde el principio la que seraacute su maacutes que previsible evolucioacuten tal y como ocurre en las laderas lsquonaturalesrsquo del entorno (Foto JF Martiacuten Duque)

2 A la buacutesqueda de la maacutexima estabilidad e integracioacuten ambiental de desmontes sobre rocas no consolidadas remodelados topograacuteficos y aumento de la estabilidad fiacutesica del sustrato

La construccioacuten de desmontes sobre rocas no con-solidadas (rocas lsquoblandasrsquo) no cuenta con un meacuteto-do de disentildeo y construccioacuten tan soacutelido y coherente como el talud Royal si bien existen iniciativas que apuntan en esa direccioacuten

En primer lugar el Departamento de Transportes del estado de California en Estados Unidos (Caltrans) sobre la base de la aproximacioacuten de Schor y Gray (2007) estaacute disentildeando y construyendo desmontes a partir de remodelados geomorfoloacutegicos que buscan una mayor estabilidad e integracioacuten ambiental en el entorno (Figura 23)

Figura 23 Comparativa entre un remodelado rectiliacuteneo del terreno y otro que se adapta a las formas del paisaje en el entorno de una infrae-structura lineal El segundo aumenta la superficie afectada pero puede tener seguacuten el escenario mayores ventajas en teacuterminos de estabilidad e integracioacuten ambiental Imagen accesible a traveacutes de httpwwwdotcagovhqLandArchecearthworkcontour_grading_roundinghtm

Como ya se ha sentildealado a lo largo de todo el ca-piacutetulo en los desmontes de rocas no consolidadas construidos en ambientes semiaacuteridos la erosioacuten hiacutedrica constituye un problema central que de-termina la estabilidad de los desmontes y el eacutexito de las restauraciones En este sentido ademaacutes de consolidar y articular como meacutetodo las posibilida-des de remodelados topograacuteficos sobre la base de los ejemplos expuestos un equipo de inves-tigacioacuten formado por personal de las Facultades de Geologiacutea y Biologiacutea de la Universidad Complu-tense de Madrid (UCM) y del servicio de I+D+i de la empresa constructora Obrascoacuten Huarte Laiacuten SA (OHL) estaacute desarrollando soluciones para reducir la erosioacuten hiacutedrica en estos escenarios mediante el manejo de procesos que intervienen en las pro-piedades fiacutesicas de los sustratos de los desmon-tes (descompactacioacuten aumento de la rugosidad estudio de la organizacioacuten microtopograacutefica de la escorrentiacutea y posibilidades de control de la mis-ma sin elementos estructuraleshellip) (Barbero et al 2009a 2009b)

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IacuteNDICE

VIII HACIA UN CAMBIO DE PARADIGMA

1 Imponer la infraestructura al territorio en lugar de adaptarla o integrarla en el mismo en la medida que los condicionantes teacutecnicos y eco-noacutemicos de cada proyecto lo permitan

2 Realizar obras en carreteras que discurren por paisajes rurales y naturales de gran valor eco-loacutegico y paisajiacutestico que bien son innecesarias bien se realizan desde una perspectiva que no considera el caraacutecter del territorio transformado Para evitar estos errores se podriacutea adoptar el enfoque que tienen para este tipo de viacuteas los paiacuteses del norte de Europa y de Norteameacuterica

3 Aplicar soluciones estaacutendar para estabilizar ta-ludes sin considerar la calidad o fragilidad del entorno en el que se realiza dicha actuacioacuten

4 No identificar conservar habilitar y promover la divulgacioacuten e interpretacioacuten de puntos luga-res y estructuras singulares de intereacutes geoloacute-gico y geomorfoloacutegico que quedan expuestos con frecuencia como consecuencia de la cons-truccioacuten de infraestructuras lineales

5 No considerar la erosioacuten hiacutedrica como un factor de inestabilidad de primer orden en taludes que tienen materiales no compactados y no incluir por tanto dicho factor en el disentildeo de los taludes

6 No prever los efectos que tendraacuten los lsquocortesrsquo realizados en el terreno en los procesos de construccioacuten de infraestructuras sobre posi-bles niveles permeables y saturados del sub-suelo ni las consecuencias que se derivaraacuten sobre la inestabilidad de los taludes

7 No considerar el efecto que introduce la varia-bilidad litoloacutegica dentro de un mismo talud a la hora de abordar su estabilizacioacuten o restau-racioacuten

8 Realizar plantaciones de arbustos y matorrales en desmontes muy susceptibles a la erosioacuten hiacutedrica lo que no consigue reducir la erosioacuten sino al contrario la favorece debido al descen-so del nivel de base local que introducen en el talud los procesos de ahoyado

Las consideraciones y ejemplos descritos tratan de ilustrar el necesario cambio de paradigma que deberiacutea ocurrir con respecto al manejo y control de la dinaacutemica geomorfoloacutegica e hidroloacutegica en el entorno de las infraestructuras lineales Ese cambio deberiacutea afectar a todas las fases disentildeo construccioacuten medias correctoras y de restaura-cioacuten y requeririacutea tratar de lsquomanejarrsquo y controlar las dinaacutemicas geomorfoloacutegica e hidroloacutegica de forma maacutes adaptativa y no basada exclusivamente en medidas estructurales convencionales Ello permi-tiriacutea lograr soluciones que combinen de manera maacutes eficiente seguridad y beneficios ambientales y econoacutemicos

A modo de ejemplo la adopcioacuten de enfoques maacutes lsquoadaptativosrsquo en taludes sobre rocas no consolida-das en ambientes mediterraacuteneos semiaacuteridos podriacutea incrementar significativamente el eacutexito de los pro-cesos de revegetacioacuten y de restauracioacuten ecoloacutegica y disminuir los costes de mantenimiento La principal mejora derivada de tratar de comprender y manejar esos procesos geomorfoloacutegicos e hidroloacutegicos des-de un enfoque ecoloacutegico se debe a la reduccioacuten en

la merma de bienes y servicios ambientales en el entorno de las infraestructuras Se podriacutea conseguir asiacute disminuir las peacuterdidas de suelo por distintos procesos erosivos (en algunos casos severos tales como formacioacuten de barrancos y caacutercavas) asiacute como por fenoacutemenos de sedimentacioacuten (por ejemplo en forma de conos aluviales) Todo ello impediriacutea a su vez la peacuterdida de suelos productivos desde un punto de vista agriacutecola forestal y ecoloacutegico Y se reduciriacutean al miacutenimo las emisiones de sedimentos a las redes fluviales proacuteximas un problema ambiental muy serio que pasa inadvertido en Espantildea

Respecto a los desmontes rocosos el meacutetodo del talud Royal sintetiza de manera magistral el enfoque adaptativo y el cambio de paradigma que aquiacute se defiende

Prestar atencioacuten al intereacutes cientiacutefico educativo y turiacutestico de determinadas exposiciones (afloramien-tos) generadas por la apertura de infraestructuras lineales podriacutea completar un abanico de medidas encaminadas a incrementar la integracioacuten ambiental de las infraestructuras lineales en su entorno

IX PREGUNTAS CLAVE

iquestCoacutemosepuedecumplirlamejorintegracioacutengeomorfoloacutegicaehidroloacutegicaposibledelainfraestructura(formulacioacutendedistintasalternativasodisentildeodelaalternativafinal)

Realizar anaacutelisis geoloacutegicos geomorfoloacutegicos e hidroloacutegicos regionales y a escala de paisaje que permitan adaptar la infraestructura al territorio minimizando los riesgos naturales y los impactos

iquestCoacutemosepuedemaximizarlalsquopermeabilidadrsquohidroloacutegicadelainfraestructurasobreelterritoriominimizandosuslsquoefectosbarrerarsquo

Explorar todas las posibilidades de disentildeo y cons-truccioacuten que sean maacutes eficientes a la hora de fa-vorecer la conectividad hidroloacutegica a ambos lados de la infraestructura (viaductos drenajeshellip)

iquestEsviableteacutecnicayeconoacutemicamentemodificarlosperfilestopograacuteficosrectiliacuteneosdelostaludesporotrosgeomorfoloacutegicamentemaacutesestablesenesaslocalizaciones

Evaluar la posibilidad de introducir variaciones a los disentildeos de taludes rectiliacuteneos si se estima que otras morfologiacuteas teacutecnica y econoacutemicamente via-bles son maacutes estables en el largo plazo

iquestCuaacutelessonlosfactoresabioacuteticosquelimitanlaestabilidadgeomorfoloacutegicadelostaludesobjetodeactuacioacutenasiacutecomoelestablecimientoydesarrollodesuelosyvegetacioacuteniquestCoacutemosepuedenlsquomanejarrsquodemaneraexpertaydesdeunenfoqueecoloacutegicodichosfactores

Realizar un anaacutelisis de esos factores a escala lo-cal y utilizar la experiencia acumulada por el esta-do del conocimiento actual para su manejo desde una oacuteptica ecoloacutegica En funcioacuten de las condicio-nes climaacuteticas y particulares ese manejo puede ir dirigido a aumentar la infiltracioacuten de agua (a partir de medidas como el aumento de la rugosi-dad o la descompactacioacuten) para evitar la erosioacuten hiacutedrica o a todo lo contrario es decir a favorecer el drenaje para evitar una saturacioacuten del subsue-lo que provoque movimientos gravitacionales

X ERRORES HABITUALES

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IacuteNDICE

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Ecohidrologiacutea erosioacuten hiacutedrica y dinaacutemica de la vegetacioacuten en laderas artificiales

Joseacute Manuel Nicolau Tiscar Espigares Mariano Moreno de las Heras y Luis Merino-Martiacuten

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CAPIacuteTULO 3 Ecohidrologiacutea erosioacuten hiacutedrica y dinaacutemica de la vegetacioacuten en laderas artificiales

Joseacute Manuel Nicolau Tiscar Espigares Mariano Moreno de las Heras y Luis Merino-Martiacuten

I INTRODUCCIOacuteN

Como se ha sentildealado en varios apartados de este manual la inestabilidad geomorfoloacutegica tiene efec-tos negativos sobre el eacutexito de la restauracioacuten de las laderas construidas (on site effects) En efecto la erosioacuten hiacutedrica condiciona los procesos ecoloacutegicos que conducen al establecimiento y desarrollo de la vegetacioacuten asiacute como a la edafogeacutenesis (Kapolka y Dollhopf 2001 Nicolau 2002) Se ha indicado que el aacutembito clave para conseguir una restauracioacuten efec-tiva es el suelo de manera que seguacuten Bradshaw (1988) el objetivo de una restauracioacuten deberiacutea ser alcanzar un suelo bioloacutegicamente funcional Sin em-bargo Whisenant et al (1995) advierten de que en muchos casos es un objetivo previo garantizar la estabilidad de los recursos edaacuteficos que son ame-nazados por los procesos erosivos Los mecanis-mos por los cuales la erosioacuten hiacutedrica afecta a los procesos ecoloacutegicos han sido abordados desde la joven disciplina de la ecohidrologiacutea A continuacioacuten se presenta una siacutentesis de los resultados obteni-dos en este campo por el grupo de investigacioacuten de la Universidad de Alcalaacute-Universidad de Zaragoza Estas investigaciones se han efectuado sobre lade-ras derivadas de la restauracioacuten de la mineriacutea de carboacuten a cielo abierto en el ambiente mediterraacuteneo-continental de Teruel Su intereacutes para el caso de las infraestructuras lineales se refiere a la restauracioacuten de los terraplenes pues se trata de materiales ver-tidos aloacutectonos a diferencia de los desmontes de materiales autoacutectonos

Las interacciones entre la escorrentiacutea superficial y diversos procesos ecoloacutegicos han podido ser abor-dadas en el Aacuterea Experimental El Moral (Utrillas Teruel) gracias a la existencia de un conjunto de la-deras construidas de la misma edad y similares ca-racteriacutesticas topograacuteficas edaacuteficas de orientacioacuten y de tratamientos de revegetacioacuten pero diferencia-das por el volumen de escorrentiacutea generado en su cabecera el cual se introduce en ellas circulando ladera abajo (run-on) Ello representa en condicio-nes de campo lo maacutes cercano a un disentildeo experi-mental dirigido a evaluar el efecto del volumen de escorrentiacutea y la erosioacuten hiacutedrica asociada sobre la dinaacutemica de la vegetacioacuten De hecho la entrada de escorrentiacuteas exoacutegenas por la cabecera de las laderas constituye una singularidad de estos sis-temas emergentes que condiciona notablemente

su evolucioacuten ecoloacutegica Estas entradas (run-on) se generan a causa del incorrecto funcionamiento de cunetas superiores o bermas o de la existencia de segmentos superiores de ladera abruptos o con-vexos que actuacutean como aacutereas-fuente de escorrentiacutea La inestabilidad que generan aconseja el maacuteximo control sobre ellas en los proyectos de restauracioacuten (Hancock y Willgoose 2004)

En las laderas artificiales la accioacuten de la escorrentiacutea superficial ndashmovilizando partiacuteculas de suelo y gene-rando geoformas que modifican la microtopografiacuteandashes un fenoacutemeno generalmente previo en el tiempo a la siembra o llegada de propaacutegulos germinacioacuten y establecimiento de la vegetacioacuten Y probablemente es un proceso tambieacuten maacutes dinaacutemico en las prime-ras etapas de la evolucioacuten de los terraplenes

II EVOLUCIOacuteN ECOLOacuteGICA E HIDROLOacuteGICA DE LADERAS ARTIFICIALES

A modo general se han identificado tres tipos de trayectorias de evolucioacuten ecoloacutegica e hidroloacutegica (Moreno de las Heras 2009a Merino-Martiacuten et al 2011) como se indica en la Figura 1 a) laderas con densas redes de regueros continuos en las que la sucesioacuten ecoloacutegica se encuentra bloqueada (arres-ted succession) presentando una escasa implanta-cioacuten vegetal (Figura 1A) b) laderas con regueros dis-continuos y geoformas de sedimentacioacuten en conos y de erosioacuten en interregueros que han desarrollado comunidades vegetales herbaacuteceas cuya distribucioacuten espacial en manchas discontinuas (lsquoclaros y matasrsquo) estaacute asociada a las aacutereas exportadoras e importa-doras de escorrentiacutea y sedimentos (Figuras 1B y 1C) c) laderas sin geoformas previas asociadas a proce-sos de erosioacuten-sedimentacioacuten en las que se produce el establecimiento de matorrales facilitadores (que interaccionan positivamente con otras especies fa-voreciendo su establecimiento y desarrollo) los cua-les controlan el flujo de agua y sedimentos (Figura 1D) Como se sentildeala en la Figura 1 estos tres tipos

de laderas restauradas representan a su vez un gradiente desde el control abioacutetico de los recursos hiacutedricos (por los procesos geomorfoloacutegicos en las laderas tipo A y B) al control bioacutetico que se produce en aquellas laderas colonizadas por matorrales faci-litadores (tipo C)

Para las condiciones de las laderas de El Moral se ha podido establecer que con niveles de cubierta vege-tal inferiores al 30 y tasas de erosioacuten en regueros superiores a 20 t ha-1 antildeo-1 la dinaacutemica del sistema conduciriacutea a un bloqueo de la sucesioacuten ecoloacutegica Con niveles superiores al 50 de cobertura vegetal y tasas de erosioacuten en regueros inferiores a 5 t ha-1 antildeo-1 la dinaacutemica del sistema conduciriacutea hacia una cubierta vegetal continua a partir de la matorraliza-cioacuten En los niveles intermedios (5-20 t ha-1 antildeo-1 y 30-50 de cobertura vegetal) se organiza una cu-bierta vegetal discontinua en un patroacuten de matas y claros subordinado a la dinaacutemica de la escorrentiacutea superficial (Moreno de las Heras 2009a)

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III FUNCIONAMIENTO ECOHIDROLOacuteGICO DE LADERAS DE ESTUDIO

En el caso de las laderas reguerizadas (Figura 2) ha podido establecerse que el principal efecto restric-tivo de la erosioacuten sobre la vegetacioacuten es la dismi-nucioacuten del contenido de humedad edaacutefica a que da lugar la evacuacioacuten eficiente de la escorrentiacutea por parte de los regueros (Moreno de las Heras et al 2011) La intensificacioacuten del deacuteficit hiacutedrico propiciada por la erosioacuten en regueros condiciona notablemente la escasa colonizacioacuten vegetal En concreto se ha comprobado que limita la germinacioacuten de las semi-llas el establecimiento y supervivencia de plaacutentulas y la produccioacuten de semillas de las plantas adultas (Espigares et al 2011)

Los regueros ademaacutes redistribuyen el agua en la la-dera (concentrando la humedad del suelo en la base de los regueros) lo que afecta tambieacuten a la distribu-cioacuten espacial de las plantas Asiacute en las laderas mi-neras de Teruel a partir de densidades de regueros de 060 m m-2 solo una comunidad pauciespeciacutefica de Medicago sativa (alfalfa originariamente introducida en las laderas mediante revegetacioacuten) es capaz de desa-rrollarse concentraacutendose los individuos en los bordes entre los interregueros y los regueros La localizacioacuten espacial de estos individuos no es casual sino que responde a la interaccioacuten entre los patrones de enve-jecimiento y muerte de las plantas con la distribucioacuten espacial de la humedad y los efectos mecaacutenicos de los

flujos de escorrentiacutea En este sentido los bordes entre los regueros y los interregueros representan las aacutereas donde estas plantas pueden minimizar los niveles de estreacutes hiacutedrico (gracias al uso de los recursos hiacutedricos presentes en el entorno de la base de los regueros) evitando a la vez el fuerte impacto mecaacutenico generado por los flujos concentrados de escorrentiacutea que circulan por los regueros Cabe sentildealar que este tipo de pa-troacuten espacial de la vegetacioacuten (dispuesto en pequentildeas manchas paralelas a los flujos de escorrentiacutea) presenta

una gran incapacidad para interceptar y redistribuir los flujos de recursos (agua nutrienteshellip) que circulan por las laderas En estas condiciones las peacuterdidas direc-tas de recursos hiacutedricos de las laderas en forma de escorrentiacutea superficial representan maacutes del 20 de la precipitacioacuten anual (Moreno de las Heras et al 2010)

En laderas con voluacutemenes intermedios de escorrentiacutea (Figura 3) la disponibilidad de agua en el suelo estaacute asociada a distintos microambientes geomorfoloacutegicos que funcionan como fuentes y sumideros de escorren-tiacutea y sedimentos La presencia de las especies vegeta-les y su distribucioacuten espacial responden a dicha oferta de agua con gramiacuteneas sembradas (Lolium perenne) o establecidas mediante procesos de colonizacioacuten natu-ral (Brachypodium sp) formando manchas densamen-te vegetadas en derramaderos de escorrentiacutea (run-off splays) Estos microambientes se encuentran asociados a microterrazas asiacute como a conos de sedimentacioacuten presentes en las discontinuidades de las redes de re-gueros En estas aacutereas con mayor disponibilidad de re-curso hiacutedrico se ven favorecidas la riqueza de especies y la cubierta vegetal asiacute como la riqueza y abundancia del banco de semillas del suelo lo que incrementa a su vez las posibilidades de germinacioacuten de las se-millas El aporte de agua desde los claros o zonas desprovistas de vegetacioacuten a las manchas de vege-tacioacuten resulta decisiva para ello (Merino Martiacuten 2010) En efecto se han identificado geoformas exportadores de agua colonizadas por individuos de Santolina sp e importadoras cubiertas por Lolium sp remanente de la siembra inicial del tratamiento de revegetacioacuten

Figura 3 Ladera con un patroacuten de manchas de vegetacioacuten estable-cidas en geoformas exportadoras (Santolina sp de flor amarilla) o importadoras (Lolium sp) de agua La distinta oferta hiacutedrica de las geoformas condiciona el patroacuten espacial de la vegetacioacuten Las flechas indican el flujo de agua desde las zonas exportadoras de Santolina sp hacia las importadoras de Lolium sp (dentro de los ciacuterculos) Noacutetese la ceja superior en la ladera que ejerce como aacuterea exportadora de escorrentiacutea hacia el conjunto de la ladera

En las laderas con voluacutemenes limitados de esco-rrentiacutea (que no reciben flujos externos Figura 4) la distribucioacuten espacial de la vegetacioacuten no estaacute asociada a geoformas derivadas de procesos de erosioacuten-sedimentacioacuten y es la misma vegetacioacuten la que controla el flujo del agua superficial y la distri-bucioacuten de la humedad Se pasa pues de un con-trol geomorfoloacutegico sobre el agua a otro bioloacutegico En las primeras etapas de la sucesioacuten ecoloacutegica se establece una formacioacuten de matorral disconti-nuo constituida principalmente por individuos de Genista scorpius (aliaga) Los individuos de esta especie pueden actuar como isla de actividad bio-loacutegica potenciada hidroloacutegicamente Por un lado mejoran sustancialmente las condiciones ambien-tales de su entorno (aportando sombra y aumen-tando el contenido de nutrientes) y por otro son capaces de interceptar el agua que circula en forma de escorrentiacutea superficial procedente de otras aacutereas desprovistas de vegetacioacuten debido al incremento en la tasa de infiltracioacuten del suelo bajo su dosel Asiacute los individuos de esta especie ejercen un efec-to facilitador sobre las plantas que crecen bajo su dosel que presentan mejor estado hiacutedrico que las situadas fuera de la influencia de la planta en las zonas de los claros desprovistas de vegetacioacuten (Merino Martiacuten 2010) Un nuevo disentildeo de las reve-getaciones alternativo a las plantaciones lineales puede surgir a partir del uso de especies capaces de funcionar como islas de fertilidad en un patroacuten de matas y claros

Figura 4 Ladera colonizada por Genista scorpius especie que ac-tuacutea como isla de actividad bioloacutegica potenciada hidroloacutegicamente Las especies del subvuelo de G scorpius se ven hidroloacutegicamente facilitadas lo que indica que existe un control bioacutetico del ciclo del agua No existen entradas externas de escorrentiacutea desde la cabecera

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Figura 1 Gradiente de interacciones ecohidroloacutegicas desde el dominio de la reguerizacioacuten (control abioacutetico) hasta el dominio de la vegetacioacuten arbustiva (control bioacutetico mediado por las islas de fertilidad) (Merino Martiacuten et al 2011)

Figura 2 Ladera reguerizada con control abioacutetico del ciclo del agua y reducido establecimiento de la vegetacioacuten El deacuteficit hiacutedrico acen-tuado por los regueros limita el establecimiento y desarrollo de la vegetacioacuten Noacutetese que los ejemplares de Medicago sativa se localizan en el borde de los regueros El elevado volumen de esco-rrentiacutea circulante tiene su origen en una amplia cabecera de ladera exportadora de escorrentiacutea

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Las especies vegetales identificadas en las parcelas ex-perimentales durante los trabajos expuestos en este capiacutetulo se clasificaron en dos grupos introducidas mediante teacutecnicas de revegetacioacuten y especies que colonizan de forma natural (Moreno de las Heras et al 2008) A su vez clasifican las que llegan de forma natural en frecuentes (presentes en maacutes del 5 de los taludes) y escasas (presentes en menos de 5 de los taludes) En la paacutegina de la izquierda se muestran seis especies pertenecientes al grupo de las frecuentes que de izquierda a derecha y de arriba abajo son Llanteacuten blanco (Plantago albicans) aguja de pastor (Erodium ciconium) murajes (Anagallis arvensis) hierba betun-era (Psoralea bituminosa) rabanza (Diplotaxis eruci-odes) y aacuternica (Pallenis spinosa) Sobre estas liacuteneas de izquierda a derecha y de arriba abajo se muestran otras tantas especies pertenecientes al grupo de las es-casas alheliacute triste (Matthiola fruticulosa) untildea de gato (Sedum sediforme) chiribita (Bellis perennis) alcabota (Mantisalca salmantica) aguilentildea (Aquilegia vulgaris) y hierba cana (Senecio vulgaris) Autor Ignacio Mola

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sIV CONCLUSIONES SOBRE LOS EFECTOS DE LA EROSIOacuteN

Los trabajos mencionados permiten precisar los efectos de la erosioacuten (por regueros y laminar) sobre el suelo y la vegetacioacuten en estas laderas artificia-les De este modo las restricciones impuestas por la erosioacuten al desarrollo vegetal dificultan considera-blemente la incorporacioacuten de materia orgaacutenica en el suelo (Moreno de las Heras 2009b) En consecuencia los procesos de desarrollo y organizacioacuten espacial de la estructura fiacutesica y funcionalidad bioloacutegica del suelo se ven draacutesticamente limitados Entre ellos el desarrollo de la estabilidad de los agregados el ta-mantildeo de las poblaciones microbianas y su actividad asiacute como la mineralizacioacuten de la materia orgaacutenica y el reciclado de nutrientes del suelo (nitroacutegeno y foacutes-foro) Incluso en condiciones de erosioacuten moderada los procesos de formacioacuten edaacutefica son considerable-mente lentos probablemente debido a las pequentildeas cantidades de materia orgaacutenica acumuladas en el suelo (en general inferiores al 2)

La relacioacuten entre los procesos erosivos y el desa-rrollo de los ecosistemas de ladera restaurados es

fundamentalmente no lineal (Moreno de las Heras et al 2011) Asiacute la disponibilidad de agua para la pro-duccioacuten vegetal se ve reducida de forma exponencial con las tasas de erosioacuten generando a su vez caiacutedas paralelas en los atributos baacutesicos de las comunida-des vegetales (biomasa y riqueza) y en la actividad de los procesos de formacioacuten del suelo En cuanto al efecto de la vegetacioacuten herbaacutecea sobre el control de la erosioacuten se ha demostrado que sigue tambieacuten una relacioacuten exponencial negativa seguacuten la cual las tasas erosivas y la generacioacuten de escorrentiacutea se reducen apreciablemente con cubiertas vegetales entre el 30-50 lo que desde el punto de vista aplicado lleva a plantear como objetivo praacutectico de las revegeta-ciones que buscan el control de la erosioacuten alcanzar un cubrimiento del 50 de la superficie del suelo (Moreno de las Heras et al 2009) Diversos trabajos desarrollados en taludes de carretera y ambientes mineros confirman la efectividad de este umbral de cubierta vegetal sobre el control de los procesos ero-sivos en entornos de clima mediterraacuteneo (Andreacutes y Jorba 2000 Loch 2000 Bochet et al 2010)

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Importancia del suelo para la restauracioacuten de la cubierta vegetal

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CAPIacuteTULO 4 Importancia del suelo para la restauracioacuten de la cubierta vegetal

Pablo Garciacutea-Palacios

I INTRODUCCIOacuteN

El hecho de incluir un capiacutetulo especiacutefico sobre el suelo y sus relaciones con la vegetacioacuten tiene como objetivo principal poner de manifiesto la importancia de los suelos como componente bioacutetico y abioacuteti-co fundamental en los proyectos de restauracioacuten al mismo nivel que la vegetacioacuten

La sucesioacuten de los ecosistemas (veacutease el Capiacutetulo 5 para una explicacioacuten maacutes detallada del concepto de sucesioacuten) se ha centrado tradicionalmente en las co-munidades de plantas (Chapin et al 1994) Sin em-bargo los suelos y las comunidades de organismos (Figura 1) que viven en ellos pueden desempentildear un papel fundamental en el desarrollo de las funciones ecosisteacutemicas antes incluso de que se establezcan las plantas (Bardgett et al 2007) Dado que la restaura-cioacuten se basa esencialmente en la manipulacioacuten de la sucesioacuten (Walker et al 2007) es necesario considerar el papel del suelo y sus interacciones con las plantas asiacute como la dinaacutemica temporal de estas relaciones en la restauracioacuten de los ecosistemas Esta separa-cioacuten claacutesica entre la ecologiacutea vegetal y la ecologiacutea de suelos ha tenido repercusiones aplicadas direc-tas Actualmente en la mayoriacutea de los proyectos de restauracioacuten de infraestructuras lineales el suelo es tratado simplemente como el soporte fiacutesico de las plantas Sin embargo esta tendencia estaacute cambiando y ya existen ejemplos concretos de restauraciones de infraestructuras lineales que han tenido eacutexito gracias a que han reconocido la importancia del suelo desde las fases iniciales del proyecto

El suelo ademaacutes del sustrato mineral contiene materia orgaacutenica aire agua y organismos vivos Su formacioacuten es el resultado de la interaccioacuten a lo largo del tiempo de varios elementos sustratos minerales clima orga-nismos presentes topografiacutea y vegetacioacuten A medida que avanza este proceso de formacioacuten aumenta la proporcioacuten de minerales secundarios (como las arci-llas) la cantidad de material con contenido orgaacutenico se desarrollan comunidades de organismos (inverte-brados hongos bacterias etc) y se incrementa la pro-duccioacuten de nutrientes permitiendo el establecimiento de las plantas La construccioacuten de infraestructuras li-neales produce una serie de impactos negativos sobre

el suelo especialmente cuando se emplean meacutetodos de excavacioacuten (pe desmonte) y en menor medida de acumulacioacuten (pe terrapleacuten) Los principales im-pactos son el empobrecimiento del sustrato y la des-truccioacuten de su estructura En este capiacutetulo se comen-tan los factores y procesos maacutes importantes a la hora de condicionar el desarrollo de la cubierta vegetal que se pretende restaurar Sin embargo ademaacutes de las teacutec-nicas ecotecnoloacutegicas habituales (veacutease Capiacutetulo 6) hay una serie de praacutecticas previas a la construccioacuten de la infraestructura que pueden aumentar enormemente la eficacia de la restauracioacuten del suelo y por lo tanto de la cubierta vegetal

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Figura 1 Fotografiacuteas de tres tipos de organismos clave para el funcionamiento del suelo y el establecimiento de las plantas A) Los organismos que forman la costra bioloacutegica (liacutequenes musgos y cianobacterias) colonizan las capas superficiales del suelo y son muy importantes para la estabilizacioacuten del suelo y el control de la erosioacuten en las fases iniciales de la sucesioacuten B) Noacutedulos radicales formados por la asociacioacuten simbioacutetica entre bacterias (pe Rhizobium) y raiacuteces de plantas leguminosas Esta asociacioacuten permite a las plantas obtener nitroacutegeno de la atmoacutesfera y por lo tanto reducir el uso de fertilizantes quiacutemicos C) Las lombrices de tierra promueven la descomposicioacuten de la materia orgaacutenica y la mezcla de los horizontes edaacuteficos

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II FACTORES Y PROCESOS QUE CONDICIONAN EL EacuteXITO DE LA RESTAURACIOacuteN DE LA CUBIERTA VEGETAL

La identificacioacuten de los factores que condicionan el crecimiento de la cubierta vegetal de los taludes de carretera y otras obras similares es fundamen-tal para la restauracioacuten a largo plazo de estos eco-sistemas degradados (Steinfeld et al 2007) Salvo que se mencione expresamente en este apartado se describen de forma general los principales factores y procesos que condicionan la restauracioacuten de la vegetacioacuten independientemente del tipo de talud Sin embargo las diferencias entre desmontes y te-rraplenes son fundamentales a la hora de determinar la importancia de cada factor

1 Aportes y peacuterdidas de agua

a Precipitacioacuten

En ausencia de riego praacutectica poco habitual en los maacutergenes de infraestructuras lineales la precipita-cioacuten es el principal aporte de agua La escasez de precipitaciones es un problema en algunas zonas del sur y sureste peninsular En general cuando la precipitacioacuten total no supera los 400 mm anuales podemos hablar de clima semiaacuterido En estas zonas las lluvias son el principal factor limitante para el desarrollo de la vegetacioacuten

b Balance infiltracioacuten-escorrentiacutea

El proceso principal que regula el equilibrio entre la cantidad de agua aportada por las precipitaciones y la que realmente es absorbida por el suelo es el balance entre infiltracioacuten y escorrentiacutea Cuando las tasas de infiltracioacuten son inferiores a las precipita-ciones se produce escorrentiacutea superficial y la con-siguiente peacuterdida de agua de lluvia Ademaacutes la es-correntiacutea arrastra materiales aumentando la erosioacuten del suelo y la peacuterdida de semillas a lo largo de la pendiente El tamantildeo y la abundancia de los agrega-dos superficiales del suelo determinan las tasas de infiltracioacuten La compactacioacuten del suelo por maquina-ria pesada durante la estabilizacioacuten de la pendiente disminuye enormemente la infiltracioacuten

c Capacidad de almacenamiento de agua uacutetil del suelo

Las propiedades hidroloacutegicas del suelo determi-nan el nuacutemero de diacuteas que el agua estaacute disponible para las plantas La cantidad de agua almacenada en el suelo se denomina capacidad de campo y depende principalmente de la textura del suelo de su estructura y de su contenido en materia or-gaacutenica Los terraplenes y los desmontes se suelen comportar de forma completamente diferente en este sentido Bochet y Garciacutea-Fayos (2004) obser-varon coacutemo en desmontes de Valencia el agua soacutelo estaba disponible para las plantas durante 15 diacuteas desde la uacuteltima precipitacioacuten Este tiempo au-mentaba hasta 7 meses en terraplenes cercanos Las distintas propiedades hidroloacutegicas del suelo de ambos taludes explican estas diferencias tan acusadas Por lo tanto en zonas semiaacuteridas el factor limitante para la vegetacioacuten no es tanto la lluvia sino el tiempo que el agua estaacute disponible para las plantas en el suelo

2 Reciclado de nutrientes y fertilidad

En general se asume que una limitacioacuten importan-te de los nuevos sustratos generados en la cons-truccioacuten de infraestructuras lineales es su baja fer-tilidad La fertilizacioacuten a gran escala es una teacutecnica de revegetacioacuten muy extendida que se suele llevar a cabo sin una evaluacioacuten previa de la fertilidad del suelo a restaurar Sin una evaluacioacuten previa la aplicacioacuten de la fertilizacioacuten por defecto por poner un ejemplo es lo mismo que si un doctor le receta medicinas a un paciente sin haberle diagnosticado previamente Por lo tanto un elemento clave para la restauracioacuten de la vegetacioacuten es la evaluacioacuten previa de los factores edaacuteficos que pueden condi-cionar su desarrollo En Espantildea hay muchos labo-ratorios tanto privados como vinculados a organis-mos puacuteblicos de investigacioacuten que se dedican a analizar muestras de suelo En la Tabla 1 se recogen algunos de los laboratorios de anaacutelisis de suelo que hay en Espantildea

Tabla 1 Ejemplos de laboratorios de anaacutelisis de suelos en Espantildea

NOMBRE CARAacuteCTER DIRECCIOacuteN PAacuteGINA WEB EMAIL

Agrolab analitica Privado Poliacutegono Industrial Mutilva Baja Calle S nordm 8 31192-Mutilva Baja Navarra

wwwagrolabes

Centro de Apoio Cientiacutefico Tecnoloacutexico aacute Investigacioacuten

Puacuteblico Universidade de Vigo Campus Lagoas-Marcosende 15 36310-Vigo

httpwebsuvigoescactiweb

Laboratorios Escuredo

Privado C Dr Domegravenech 1 planta 43203-Reus Tarragona

labescuredonet

Laboratorio Agroalimentario de Atarfe

Puacuteblico Avda de la Diputacioacuten sn 18230-Atarfe Granada

Servizos de Apoio a Investigaccedilatildeo

Puacuteblico Universidad de A Coruntildea Servizos de Apoio aacute Investigacioacuten Edificio Servicios Centrales de Investigacioacuten Campus de Elvintildea sn 15071 A Coruntildea

httpwwwsaiudcescastellanophpintrophp

NutriLab-URJC Puacuteblico Edificio Departamental I laboratorio 225 C Tulipaacuten sn 28933-Moacutestoles

httpwwwnutrilab-urjcesplt_Homeaspx

El reciclado de nutrientes es el proceso por el cual el suelo almacena y libera nutrientes esenciales para el crecimiento y la supervivencia de las plan-tas El objetivo de este apartado no es explicar cuaacuteles son los nutrientes limitantes para el cre-cimiento de las plantas (informacioacuten disponible en cualquier libro especializado) sino poner de manifiesto la importancia de este proceso natural para el desarrollo de la vegetacioacuten Cuando se trata de restaurar taludes de infraestructuras li-neales el objetivo principal es crear sistemas que sean autosuficientes a largo plazo Por lo tanto favorecer el reciclado de nutrientes maacutes allaacute de las aportaciones puntuales que pueda ocasionar la fertilizacioacuten es una herramienta muy eficaz para favorecer procesos sucesionales durante el pro-yecto de restauracioacuten

a Carbono y nitroacutegeno

El nitroacutegeno suele ser el nutriente maacutes limitante para el crecimiento de las plantas y por lo tanto para la recuperacioacuten de la cubierta vegetal en los

taludes de infraestructuras lineales (Petersen et al 2004) En general se habla de un miacutenimo de 700 kg N totalha para el automantenimiento de un ecosistema fuertemente degradado (Bradshaw et al 1982) El carbono regula la cantidad de nitroacute-geno disponible en los suelos porque es la fuen-te de energiacutea principal para los microorganismos del suelo encargados de descomponer la materia orgaacutenica La proporcioacuten de carbono y nitroacutegeno presente en el suelo (CN) es un buen indicador de deacuteficit o superaacutevit de nitroacutegeno para las plantas Si los organismos descomponedores no encuen-tran suficiente nitroacutegeno en la materia orgaacutenica lo tomaraacuten directamente del suelo compitiendo seriamente por este nutriente con las plantas Por ejemplo un CN de 301 o mayor indica que los descomponedores han consumido el nitroacutegeno disponible en el suelo dejando muy poco para las plantas Por lo tanto no existe una solucioacuten uacutenica y general en relacioacuten con la fertilidad del suelo y las consecuencias para la vegetacioacuten ya que el balance puede ser positivo o negativo seguacuten el objetivo que se quiera conseguir

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bull Si el objetivo es aumentar raacutepidamente la cobertu-ra vegetal con la intencioacuten de evitar la erosioacuten de los primeros meses posteriores a la construccioacuten del talud un alto contenido en nitroacutegeno favore-ceraacute la presencia de especies vegetales nitroacutefilas de raacutepido crecimiento Por lo tanto la fertilizacioacuten puede ser una buena solucioacuten a corto plazo para aumentar la cobertura vegetal de taludes extrema-damente pobres como los taludes semiaacuteridos de la provincia de Valencia (0074 mg N totalg sue-lo) donde los tratamientos de restauracioacuten han de mejorar draacutesticamente las propiedades del suelo como paso previo a la colonizacioacuten de semillas desde zonas naturales (Bochet et al 2007)

bull Si el objetivo es promover la diversidad de la comunidad de plantas y favorecer la entrada de especies de lento crecimiento caracteriacutesticas de etapas sucesionales maacutes avanzadas un alto con-tenido en nitroacutegeno puede ser contraproducen-te Las especies de raacutepido crecimiento anteriores dominaraacuten la comunidad e impediraacuten el estable-cimiento de especies nativas perennes En este caso la aplicacioacuten de productos vegetales de alto contenido en CN (mulch paja etc) a la superfi-cie del suelo o mezclado en eacutel es una buena es-trategia para disminuir la cantidad de nitroacutegeno disponible para las especies anuales dominantes (veacutease Capiacutetulo 7) y favorecer la presencia de especies de intereacutes para la restauracioacuten a largo plazo (lentildeosas perennes etc)

b Actividad bioloacutegica e interacciones planta-organismos del suelo

La tasa de cambio hacia la vegetacioacuten natural a lo largo de la sucesioacuten secundaria en ecosistemas antropizados depende en gran medida de las in-teracciones entre las plantas y la biota del suelo (Wardle et al 2004 Holtkamp et al 2008) Las comunidades de plantas estaacuten iacutentimamente aso-ciadas a los organismos del suelo y a los procesos ecoloacutegicos que se desarrollan en eacutel Las plantas proporcionan carbono y otros nutrientes a las co-munidades de descomponedores del suelo y sus raiacuteces tambieacuten constituyen el haacutebitat adecuado para multitud de organismos como herbiacutevoros patoacutegenos y simbiontes (Wardle 2002 Bardgett 2005) Por otro lado la biota del suelo determina la estructura y la productividad de las comunida-des vegetales a traveacutes de la descomposicioacuten de la materia orgaacutenica que condiciona la disponibilidad

de nutrientes para las plantas Sin embargo la biota del suelo tambieacuten controla la estructura y la composicioacuten de las comunidades vegetales a traveacutes de las relaciones entre las plantas y los organismos que estaacuten iacutentimamente asociados a sus raiacuteces (Wardle 2002) La contribucioacuten de los microorganismos del suelo a distintos procesos ecosisteacutemicos de intereacutes para las plantas es altiacute-sima pudiendo llegar a controlar hasta el 50 de la productividad vegetal el 80 de la absorcioacuten de nitroacutegeno y foacutesforo y el 50 de la diversidad vegetal en ecosistemas terrestres (Van der Heijden et al 2008) Estas relaciones pueden ser mutualis-tas como las formadas con las bacterias fijadoras de nitroacutegeno o con los hongos micorriacutecicos (Figura 2A y 2B) o antagonistas como las establecidas con los herbiacutevoros y los patoacutegenos de las raiacuteces (Figura 2C y 2D) Las plantas vasculares con sim-biontes fijadores de nitroacutegeno (pe leguminosas) tienen una importancia capital durante las etapas iniciales de las sucesioacuten porque aumentan los ni-veles de este nutriente en el suelo hasta alcan-zar los requeridos por especies caracteriacutesticas de etapas tardiacuteas de la sucesioacuten (Walker y del Moral 2003) Las asociaciones con hongos micorriacutecicos estaacuten ampliamente extendidas en el reino vegetal Se estima que aproximadamente el 80 de todas las plantas terrestres forman asociaciones simbioacute-ticas con este tipo de hongos (Smith y Read 1997) Los hongos micorriacutecicos aportan resistencia a las enfermedades y a la sequiacutea y proporcionan una variedad de nutrientes a las plantas incluyendo nitroacutegeno foacutesforo cobre hierro y zinc (Van der Heijden et al 2008) Las relaciones antagonistas o perjudiciales para las plantas las suelen pro-vocar los patoacutegenos y los herbiacutevoros de las raiacute-ces Este tipo de relaciones han sido ampliamente estudiadas en un contexto agronoacutemico aunque su papel como modulador de la dinaacutemica de las comunidades vegetales y la sucesioacuten es mucho maacutes desconocido (Wardle 2002) No obstante hay evidencias que sugieren un papel clave de estos organismos en la sustitucioacuten de las especies vege-tales pioneras por especies tardiacuteas de la sucesioacuten (Van der Putten et al 1993) Por lo tanto este tipo de interacciones entre las plantas y la bio-ta del suelo tiene implicaciones muy importantes para la restauracioacuten de los ecosistemas afectados por infraestructuras lineales en donde uno de los objetivos principales a largo plazo es el estable-cimiento de comunidades vegetales caracteriacutesticas de etapas sucesionales avanzadas

Figura 2 A) Noacutedulos bacterianos de fijacioacuten de nitroacutegeno asociados a la raiacutez de una leguminosa B) Red micorriacutecica formada por las hifas de un hongo C) Nematodo del geacutenero Heterodera herbiacutevoro de las raiacuteces de muchas especies de intereacutes agronoacutemico D) Hongo del geacutenero Pythium patoacutegeno de las raiacuteces muy comuacuten en muchas especies de plantas vasculares (Fuente httpwwwusdagov)

Existen pocos trabajos sobre las implicaciones para la restauracioacuten de las interacciones planta-biota del suelo y la mayoriacutea de ellos se han desarrolla-do en campos agriacutecolas abandonados de Europa central Kardol et al (2006) establecieron que el signo de estas interacciones cambiaba de negativo a positivo a lo largo de la sucesioacuten y atribuiacutean la temporalidad de las especies vegetales pioneras y la persistencia de las especies caracteriacutesticas de etapas sucesionales avanzadas a este tipo de me-canismos En herbazales de taludes de carretera del sureste semiaacuterido de Madrid Garciacutea Palacios et al (2011) observaron coacutemo cinco antildeos despueacutes de la construccioacuten de un terrapleacuten las interacciones planta-microorganismos del suelo eran capaces de promover un eficiente reciclado de los nutrientes

(Figura 3) En este caso (terraplenes de clima se-miaacuterido con pendientes inferiores a 30deg) no era necesario haberse gastado mucho presupuesto en tratamientos de restauracioacuten como la fertilizacioacuten o la hidrosiembra Los cambios sucesionales a corto plazo (cinco antildeos) en la composicioacuten de las comu-nidades vegetales y microbianas del suelo fueron capaces de mejorar el reciclado de nutrientes un proceso clave para la restauracioacuten a largo plazo de estos herbazales Por ello una de las teacutecnicas maacutes prometedoras para la restauracioacuten de taludes de infraestructuras lineales y que tiene en cuenta la importancia de las interacciones planta-organismos del suelo es el uso de inoacuteculos de suelo como ca-talizador de la sucesioacuten vegetal (Estauacuten et al 2007 Steinfeld et al 2007)

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Talud de dos antildeos

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COMUNIDADVEGETAL

COMUNIDADMICROBIANA

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Talud de cinco antildeos

Figura 3 Interacciones comunidad vegetal-comunidad microbiana del suelo en dos terraplenes de distinta edad de la provincia de Madrid (Autopistas R4 y AP-36) En el esquema se observa coacutemo las interacciones planta-microorganismos del suelo eran responsables del 40 del reciclado de nutrientes en los terraplenes maacutes joacutevenes Este valor aumentoacute hasta el 75 en los taludes de cinco antildeos (Fuente Garciacutea-Palacios et al 2011)

c pH y salinidad

El pH del suelo modula la disponibilidad de los nutrientes minerales la toxicidad mineral y la fija-cioacuten de nitroacutegeno Si los suelos son aacutecidos (pH lt 6) la habilidad de las plantas para utilizar algunos nutrientes como el calcio o el magnesio disminuye Si la acidez es auacuten mayor (pH lt 45) el aluminio se vuelve soluble y toacutexico para las plantas Si los suelos son baacutesicos o alcalinos (pH lt 8) la elevada presencia de carbonatos puede interferir en la ob-tencioacuten de nutrientes como el foacutesforo hierro o zinc En suelos muy salinos (pH lt 85) tiacutepicos de zonas aacuteridas y semiaacuteridas la concentracioacuten de sodio pue-de impedir la absorcioacuten de agua por las plantas La tierra vegetal tiene contenidos en sales menores que las capas inferiores por lo tanto si durante la construccioacuten del talud es retirada la salinidad del suelo puede aumentar draacutesticamente Como en ca-sos anteriores una correcta evaluacioacuten previa debe ser realizada antes de decidir queacute teacutecnica de res-tauracioacuten se debe emplear

d Tierra vegetal

La capa superficial del suelo (sus primeros centiacutemetros) o tierra vegetal (en ingleacutes topsoil) es el horizonte edaacute-fico que se encuentra justo debajo de la hojarasca y que se caracteriza por contener grandes cantidades de materia orgaacutenica raiacuteces y semillas (Balaguer 2002 Tor-mo et al 2007) La tierra vegetal tiene una alta concen-tracioacuten de nutrientes disponibles para las plantas Asiacute mismo alberga la mayor parte de la actividad bioloacutegica del suelo amortigua las condiciones microclimaacuteticas y disminuye la peacuterdida de agua por evaporacioacuten (Tormo et al 2009) Los sitios que carecen de tierra vegetal no pueden albergar comunidades productivas de plantas ni coberturas vegetales altas lo cual se traduce en ero-sioacuten Una praacutectica habitual en la construccioacuten de infra-estructuras lineales es la retirada y almacenamiento de los horizontes superficiales del suelo (30-50 cm) para reincorporarlos posteriormente a la superficie de los ta-ludes recieacuten generados La aplicacioacuten de tierra vegetal si esta se ha conservado debidamente (veacutease aparta-do III2 Almacenamiento del suelo) puede suavizar la

mayor parte de las condiciones edaacuteficas para el desa-rrollo de la vegetacioacuten Un buen ejemplo de los efectos de la tierra vegetal para la restauracioacuten de la vegeta-cioacuten de taludes de carretera es el estudio de Tormo et al (2007) realizado en taludes de Valencia bajo clima semiaacuterido En este estudio las parcelas con tierra ve-getal alcanzaron en un antildeo los mismos valores de co-bertura vegetal que las parcelas sin dicho tratamiento alcanzaron en cuatro Sin embargo existen diferencias en cuanto al eacutexito de la tierra vegetal entre desmontes y terraplenes Mientras que en terraplenes suele ser un tratamiento muy eficaz para aumentar la cobertura ve-getal durante los primeros antildeos de la restauracioacuten en desmontes con elevada pendiente (gt30ordm) la aplicacioacuten de tierra vegetal suele fracasar (Valladares et al 2004) al menos en la mayor parte del talud (Figura 4)

3 Condiciones fiacutesicas

Un aspecto clave para el eacutexito de la colonizacioacuten vegetal en suelos degradados como los que forman

los taludes de infraestructuras lineales es la textura del material (Tormo et al 2009) Si la textura de los materiales es demasiado gruesa los nutrientes y el agua no podraacuten quedar retenidos en los poros del suelo

Si a esto le unimos una elevada pedregosidad del terreno la disponibilidad de nutrientes y agua para las plantas seraacute muy reducida incluso con al-tas precipitaciones y una eficiente mineralizacioacuten de la materia orgaacutenica Si la textura de los ma-teriales es demasiado fina (dominio de arcillas) se pueden producir condiciones de encharcamien-to y falta de oxiacutegeno (anaerobiosis) que pueden afectar al establecimiento de las plantas Por lo tanto las condiciones idoacuteneas se consiguen con una textura equilibrada La falta de materia orgaacute-nica es otro factor que condiciona enormemente la estructuracioacuten de los suelos de los taludes y que tambieacuten contribuye a disminuir la retencioacuten de agua y nutrientes y se da maacutes frecuentemente en texturas gruesas que finas

Figura 4 Banda de vegetacioacuten favorecida por la presencia de tierra vegetal en la cabecera de un desmonte de la autopista de la Costa del Sol (Maacutelaga) (Foto Archivo documental del Grupo de Ecologiacutea y Fisiologiacutea vegetal de Plantas Mediterraacuteneas del IRN-CCMA CSIC)

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IacuteNDICE

III MEDIDAS PREVENTIVAS

En el apartado anterior se han descrito los principales factores del suelo que condicionan el desarrollo de la cubierta vegetal a restaurar y coacutemo la tierra vegetal puede paliar algunos de los deacuteficits de los sustratos generados por infraestructuras lineales A continuacioacuten se detallan algunas medidas preventivas que pueden tomarse en la fase de construccioacuten del talud para re-ducir los efectos negativos de los anteriores factores edaacuteficos en la restauracioacuten de la cubierta vegetal

1 Movimiento del suelo

El principal cambio que sufre el suelo durante su extraccioacuten y transporte en las obras de construc-cioacuten de la infraestructura lineal es el aumento de la compactacioacuten con la consiguiente disminucioacuten de la porosidad La baja porosidad del suelo afecta negativamente a la capacidad de las raiacuteces de las plantas para penetrar en profundidad disminuye el movimiento de agua y nutrientes y aumenta la pro-babilidad de que se den condiciones anaeroacutebicas (Harris et al 1996) La compactacioacuten del suelo es un fenoacutemeno difiacutecil de corregir y de un elevado costo Por lo tanto los movimientos de tierra realizados durante la fase de construccioacuten de la infraestructura lineal deben disentildearse con la intencioacuten de mitigar la gravedad de este impacto Las actuaciones que pueden llevarse a cabo para prevenir la compacta-cioacuten del suelo tienen que ver con la maquinaria que se utilice en la construccioacuten del talud (peso tipo de neumaacuteticos velocidad de trabajo nuacutemero de pasa-das etc) y con la naturaleza del sustrato (contenido en humedad materia orgaacutenica etc)

2 Almacenamiento del suelo

Los impactos maacutes negativos para el suelo como sus-trato para el crecimiento de la vegetacioacuten a nivel bioloacutegico quiacutemico y fiacutesico ocurren durante su al-macenamiento como paso previo a su colocacioacuten en el emplazamiento definitivo (Harris et al 1996) La duracioacuten del almacenamiento es fundamental para el eacutexito posterior del extendido de la tierra vegetal Asiacute Rokich et al (2000) registraron una disminucioacuten del 50 en la germinacioacuten de semillas en las parcelas tratadas con tierra vegetal almacenada durante un antildeo respecto a las que fueron tratadas con tierra ve-getal fresca La altura de los acuacutemulos de tierra tam-bieacuten es importante Las capas superiores mantienen condiciones aeroacutebicas durante el almacenamiento

Las capas maacutes profundas desarrollan condiciones anaeroacutebicas (Harris et al 1996) La capa intermedia oscila entre ambas dependiendo de las condiciones de humedad El tamantildeo y la velocidad de los efectos negativos dependen de las caracteriacutesticas texturales del suelo Los suelos arcillosos se vuelven anaero-bios en un 90 cuando la altura del acuacutemulo de tierra supera los 2 metros Sin embargo los suelos arenosos aguantan alturas similares con un porcen-taje de condiciones anaeroacutebicas mucho maacutes bajo Por lo tanto la altura de los acuacutemulos de tierra debe ser lo maacutes baja posible siempre teniendo en cuenta el espacio del que se disponga El porcentaje de anaerobiosis presente en la tierra vegetal almacena-da debe ser tenido en cuenta a la hora de planificar los futuros tratamientos de restauracioacuten Los efectos que se producen durante la fase de acumulacion del suelo fundamentalmente en las capas maacutes profun-das son los siguientes

a Efectos fiacutesicos

Fundamentalmente acentuacutean los efectos producidos durante la fase de transporte Se rompen las es-tructuras bioloacutegicas que mantienen las partiacuteculas del suelo unidas La disminucioacuten en la estabilidad de los agregados dificulta la capacidad del suelo para pro-porcionar una aireacioacuten y drenaje adecuados para el crecimiento vegetal Cualquier perforacioacuten producida por invertebrados del suelo o por tratamientos de restauracioacuten seraacute raacutepidamente bloqueada por pe-quentildeas partiacuteculas que ya no estaacuten unidas formando agregados estables

b Efectos quiacutemicos

Dado que la compactacioacuten imposibilita el aporte de oxiacutegeno al suelo es normal que se desarrollen con-diciones anaeroacutebicas durante los primeros meses del almacenamiento En esta situacioacuten se producen gran cantidad de sulfitos que dan el caracteriacutestico color gris al suelo poco aireado La falta de oxiacutege-no tambieacuten impide la transformacioacuten de nitroacutegeno orgaacutenico a nitrato producida durante la mineraliza-cioacuten de la materia orgaacutenica El ciclo del nitroacutegeno se detiene en el amonio que se acumula a costa de una disminucioacuten en el nitrato Ademaacutes el nitrato acumulado anteriormente se transforma en nitroacutege-no gaseoso que termina en la atmoacutesfera Cuando el suelo se extiende para construir el talud el nitroacute-geno acumulado se puede perder raacutepidamente con las primeras lluvias

c Efectos bioloacutegicos

La abundancia de microorganismos en el suelo almacenado disminuye en profundidad impidien-do la realizacioacuten de las funciones claves para el

reciclado de nutrientes anteriormente detalladas Los invertebrados como las lombrices de tierra son extremadamente susceptibles ya que son fiacutesi-camente destruidos durante el transporte y alma-cenamiento del suelo

VI EJEMPLOS DE EacuteXITO Y DE FRACASO

Ejemplo de eacutexito Uso de inoacuteculos de micorrizas para la restauracioacuten de especies lentildeosas en taludes de carretera y canteras (Caravaca et al 2003)

Doacutende y cuaacutendo Murcia (38deg 23rsquo N 1deg 10rsquo O) 2000-2001

Ecosistema a restaurar espartal semiaacuterido degrada-do por pastoreo y talas Precipitacioacuten total 315 mm temperatura media 20 degC Sustrato calizo Cobertura inicial del 20 dominada por Rosmarinus officina-lis y Stipa tenacissima Cuatro especies de arbusto como objetivo de la restauracioacuten

Tratamiento inoacuteculo de micorrizas en tres niveles inoacuteculo nativo de suelo de un aacuterea natural cercana [(compuesto por esporas de Glomus geosporum (Ni-col amp Gerd) Walker (EEZ 31) Glomus albidum Walker amp Rhodes (EEZ 39) Glomus microaggregatum Koske Gemma amp Olexia (EEZ 40) Glomus constrictum Tra-ppe (EEZ 42) Glomus mosseae (Nicol amp Gerd) Gerd amp Trappe (EEZ 43) Glomus coronatum Giovannetti (EEZ 44) Glomus intraradices Schenck amp Smith (EEZ 45) y Glomus sp (EEZ 46)] inoacuteculo exoacutetico [(com-puesto por esporas de Glomus claroideum Schenck amp Smith (EEZ 24)] y control

IV PREGUNTAS CLAVE

iquestCuaacuteles son las condiciones iniciales del suelo

Para contestar a esta pregunta se deben analizar distintas variables edaacuteficas (pH carbono nitroacute-geno foacutesforo textura salinidad estabilidad de agregados banco de semillas) en laboratorios externos o mediante convenios con centros de investigacioacuten

iquestQueacute hago con la tierra vegetal

Evitar retirarla siempre que se pueda En caso contrario el almacenamiento hasta su posterior extendido debe durar el menor tiempo posible

iquestCoacutemo almaceno la tierra vegetal

En acuacutemulos de tierra de poca altura y compactacioacuten

iquestQueacute tratamientos son necesarios para recuperar la cubierta vegetal

En primer lugar se ha de evaluar la necesidad de llevar a cabo una restauracioacuten activa Este tipo de restauracioacuten se justificaraacute uacutenicamente en los ca-sos en los que la colonizacioacuten natural de semillas desde aacutereas cercanas y la posterior sucesioacuten del ecosistema se vean fuertemente limitadas por las condiciones edaacuteficas del sitio a restaurar

V ERRORES HABITUALES

bull Destruccioacuten o descarte de la tierra vegetal o topsoil durante la fase de construccioacuten

bull Mezcla de la tierra vegetal o topsoil con el resto del suelo del talud o con materiales de construccioacuten externos

bull Acuacutemulos de suelo de gran altura independiente-mente de sus caracteriacutesticas texturales y almace-nados durante periodos prolongados de tiempo

bull Fertilizacioacuten a gran escala desde el primer antildeo de la restauracioacuten sin realizar anaacutelisis previos del suelo

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Resultados Como se puede observar en la Figura 5 un antildeo despueacutes de la plantacioacuten la biomasa (peso seco) de Olea europaea y de Pistacia lentiscus fue un 630 y 300 respectivamente mayor en los tratamientos inoculados que en los no inoculados La biomasa de Retama sphaerocarpa fue significa-tivamente mayor en los plantones inoculados con micorrizas exoacuteticas La biomasa de Rhamnus lycioi-des fue significativamente mayor en los plantones inoculados con micorrizas nativas

Conclusiones El uso de inoacuteculos de suelo con mi-corrizas es una buena estrategia para aumentar la biomasa de especies lentildeosas de intereacutes para la restauracioacuten

En algunas ocasiones las esporas de micorrizas recogidas en zonas cercanas al aacuterea a restaurar son maacutes efectivas que los inoacuteculos comerciales para garantizar el establecimiento de arbustos nativos

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Figura 5 Peso seco de O europaea P lentiscus R sphaerocarpa y R lycioides bajo los tres tratamientos de inoacuteculos de micorrizas evaluados Los datos son medias plusmn error estaacutendar Modificado a partir de Caravaca et al (2003)

Ejemplo de fracaso Restauracioacuten de un herbazal de carre-tera mediante inoculacioacuten de micorrizas (White et al 2008)

Doacutende y cuaacutendo Minnesota EE UU (44deg 46acuteN 93deg 24acuteO) 1997-1999

Ecosistema a restaurar Herbazal en un talud de carretera Precipitacioacuten total 700 mm temperatura

media 59 degC Sustrato arenoso Cobertura inicial del 30 dominada por especies anuales pioneras

Tratamiento inoacuteculo de micorrizas en tres ni-veles inoacuteculo local (uso de suelo de un aacuterea natural cercana dosis de 23000 esporasm2) inoacuteculo comercial (dosis de 4800 esporam2) y control

Resultados Como se puede observar en la Figura 6 ni la biomasa total (A) ni el porcentaje de biomasa total compuesto por especies objetivo para la res-tauracioacuten (B) fueron positivamente afectados por los dos tipos de inoacuteculos tanto en 1998 (Biomasa total F

312 = 0442 P = 0636 Especies objetivo

F312

= 0585 P = 0728) como en 1999 (Biomasa total F

312 = 0442 P = 0728 Especies objetivo

F312

= 0493 P = 0694)

Conclusiones la elevada fertilidad fundamental-mente de foacutesforo disponible y la presencia de mi-corrizas en el suelo inicial diluyeron los efectos del inoacuteculo en las comunidades vegetales Este estudio pone de manifiesto la importancia de realizar anaacuteli-sis del suelo como paso previo a la restauracioacuten Los inoacuteculos de suelo solo son necesarios cuando las condiciones del mismo son especialmente limitantes para la vegetacioacuten

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Figura 6 Biomasa total (A) y proporcioacuten de la biomasa total compuesta por especies objetivo para la restauracioacuten (B) Las especies objetivo de la restauracioacuten son tanto las introducidas en la siembra como aquellas que colonizaron el talud desde aacutereas naturales cercanas Los datos son medias plusmn error estaacutendar Modificado a partir de White et al (2008)

VII BIBLIOGRAFIacuteA

Balaguer L 2002 Las limitaciones de la restauracioacuten de la cubierta vegetal Ecosistemas XI 1 (disponible en httpwwwrevistaecosistemasnet)

Bardgett R 2005 The biology of soils a commu-nity and ecosystem approach Oxford University Press

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Impo

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White JA J Tallaksen y I Charvat 2008 The effects of arbuscular mycorrhizal fungal inoculation at a roadside prairie Mycologia 1006ndash11

INSECTOS HERBIacuteVOROS

Numerosos insectos se alimentan de plantas sobre todo de sus partes vegetativas (hojas y tallos) En la laacutemina se muestra en la imagen de la izquierda una oruga de mariposa (Fam Pieridae) Las tres imaacute-genes de la derecha corresponden a distintas espe-cies de saltamontes (Ortoptera) Autor Ignacio Mola

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Procesos ecoloacutegicos y restauracioacuten de la cubierta vegetal

Esther Bochet Pablo Garciacutea-Palacios Begontildea Peco Jaume Tormo y Patricio Garciacutea-Fayos

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CAPIacuteTULO 5 Procesos ecoloacutegicos y restauracioacuten de la cubierta vegetal

Esther Bochet Pablo Garciacutea-Palacios Begontildea Peco Jaume Tormo y Patricio Garciacutea-Fayos

I INTRODUCCIOacuteN Y OBJETIVOS

Los taludes de infraestructuras lineales (autopistas carreteras caminos viacuteas del trenhellip) se caracterizan por tener amplias pendientes de suelo desnudo y afloramientos rocosos originadas por grandes movi-mientos de tierra Las laderas de los taludes despro-vistas de vegetacioacuten al teacutermino de la obra quedan expuestas al efecto de las lluvias con consecuencias que pueden ser graves para la seguridad vial (Na-varro 2002) Los riesgos de erosioacuten en los primeros meses que pueden llevar al derrumbe del talud en su caso maacutes extremo exigen una intervencioacuten urgente que pretende seguacuten los casos restaurar una cubier-ta vegetal densa en las laderas recieacuten construidas La forma maacutes sencilla y menos costosa de revegetar estas laderas consiste en no intervenir (restauracioacuten pasiva) pero la colonizacioacuten espontaacutenea por parte de las plantas no siempre es suficiente o suficientemente raacutepida Por ello se recurre frecuentemente a teacutecni-cas de restauracioacuten activa que favorecen y aceleran el establecimiento de la vegetacioacuten con el objetivo de controlar la erosioacuten y darle estabilidad al talud La teacutecnica de restauracioacuten maacutes comuacuten para cumplir este objetivo geomorfoloacutegico a corto plazo es la hi-drosiembra El eacutexito de las hidrosiembras es muy va-riable dependiendo en gran medida de factores como el clima la litologiacutea el tipo de talud su orientacioacuten y su pendiente la eacutepoca de la siembra las especies sembradas y las interacciones de estas uacuteltimas entre ellas y con las condiciones de la zona a restaurar (Andreacutes et al 1996 Cano et al 2002 Bochet y Garciacutea-Fayos 2004 veacutease Capiacutetulo 74) Como prueba de

ello se han descrito resultados muy dispares durante los primeros meses posteriores a la actuacioacuten Estos resultados van desde la formacioacuten de una cubierta vegetal densa y eficaz para el control de los procesos erosivos (Matesanz et al 2006) hasta una casi com-pleta desaparicioacuten del conjunto de especies sembra-das con un recubrimiento del suelo insuficiente para frenar la erosioacuten (Andreacutes y Jorba 2000)

Recientemente cientiacuteficos y teacutecnicos coinciden en que el eacutexito de las medidas de restauracioacuten pasa por un avance en el conocimiento ecoloacutegico de estos eco-sistemas emergentes cuyo funcionamiento es poco conocido en la actualidad (Valladares y Gianoli 2007) Asiacute el conocimiento de las reglas que controlan la colonizacioacuten el ensamblaje de las especies y la suce-sioacuten en las comunidades de taludes permitiraacute extraer conclusiones uacutetiles y elaborar pautas generales para la restauracioacuten de estos ecosistemas maacutes allaacute de las especificaciones locales de las zonas a restaurar (Temperton et al 2004 Valladares y Gianoli 2007)

Estudios recientes sobre la flora y la vegetacioacuten de taludes asiacute como sobre los procesos y funciones

asociados a estos ecosistemas nos permiten crear una soacutelida base de conocimiento cientiacutefico necesaria para el desarrollo de protocolos y teacutecnicas eficaces para la restauracioacuten de estas laderas

El objetivo de este capiacutetulo es dar a conocer desde la perspectiva de la ecologiacutea de la restauracioacuten las bases ecoloacutegicas a tener en cuenta a la hora de plantear una restauracioacuten del Capital Natural en for-ma de bienes y servicios (ecosistemas funcionales diversidad etc) en proyectos de infraestructuras lineales Estas bases fundadas en el conocimien-to cientiacutefico constituyen un complemento necesario a las aproximaciones tecnoloacutegicas maacutes habituales (veacutease Capiacutetulo 7) En primer lugar se describe bre-vemente el marco teoacuterico es decir los procesos eco-loacutegicos relevantes que condicionan el eacutexito de una restauracioacuten (colonizacioacuten filtros ecoloacutegicos ensam-blaje de especies en comunidades sucesioacuten) En se-gundo lugar se identifican los factores que limitan la colonizacioacuten espontaacutenea de los ecosistemas de taludes de infraestructuras lineales Finalmente se proponen distintas aplicaciones praacutecticas para una gestioacuten maacutes adecuada de dichos ecosistemas

II PROCESOS ECOLOacuteGICOS RELEVANTES MARCO TEOacuteRICO

1 La colonizacioacuten y la sucesioacuten

Cuando una zona queda desprovista de vegetacioacuten como es el caso de los taludes de infraestructuras lineales se pone en marcha el proceso de sucesioacuten vegetal que comienza por la fase de colonizacioacuten Esta uacuteltima a su vez podriacutea definirse como una funcioacuten de distintos procesos que se suceden en el tiempo la dispersioacuten la fijacioacuten y la germinacioacuten de semillas y el establecimiento de las plantas y su supervivencia (Zobel et al 2000) Asiacute la colonizacioacuten de una zona sin vegetacioacuten depende en primer lu-gar de la llegada de semillas por dispersioacuten desde las zonas circundantes a traveacutes de distintos vectores como el viento el agua o los animales Una vez en la zona si esta presenta cierta pendiente aquellas especies cuyas semillas tienen mecanismos de fija-cioacuten que impiden ser arrastrados por la gravedad o el agua de escorrentiacutea tendraacuten maacutes posibilidades de mantenerse en las laderas que aquellas especies que no disponen de dichos mecanismos (Garciacutea-Fayos et al 2010) Posteriormente las semillas que resisten al arrastre han de encontrar una serie de condiciones favorables que les permitan germinar y desarrollarse hasta convertirse en un individuo

adulto Tras la fase de colonizacioacuten las interacciones entre plantas tanto a traveacutes de la facilitacioacuten de una especie por otra que le ayuda a establecerse (inte-raccioacuten positiva) o a traveacutes de la exclusioacuten de una especie por la presencia de especies competidoras (interaccioacuten negativa) implican cambios graduales en la composicioacuten floriacutestica de las comunidades

En definitiva la colonizacioacuten de una zona dada ndashy la comunidad de plantas resultantendash depende de tres grandes grupos de factores a) la disponibilidad de semillas b) las condiciones del medio y c) las inte-racciones planta-planta conocidos a su vez como los tres grandes lsquofiltros ecoloacutegicosrsquo que determinan el ensamblaje de las especies

2 Filtros ecoloacutegicos que determinan la colonizacioacuten y el ensamblaje de las comunidades

De acuerdo con la teoriacutea de ensamblaje de las especies (assembly rules en ingleacutes) solo aque-llas pertenecientes al conjunto o pool de especies locales capaces de atravesar una serie de filtros

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podraacuten establecerse con eacutexito en una zona deter-minada (Keddy 1992 Weiher y Keddy 1999 Figu-ra 1) Mediante un proceso de seleccioacuten a traveacutes de sucesivos filtros el tamantildeo del pool de es-pecies locales se ve progresivamente reducido a un subconjunto de especies del pool original La seleccioacuten de las especies se hace en funcioacuten de sus rasgos morfoloacutegicos y funcionales que defi-nen su capacidad para alcanzar la zona por dis-persioacuten (filtro de la dispersioacuten) para adaptarse a las condiciones del medio (filtro de los factores abioacuteticos) y para competir con las demaacutes plantas establecidas (filtro de las interacciones bioacuteticas) (Keddy 1992 Weiher y Keddy 1999)

A medida que van entrando las especies en la comunidad (pool actual) y transcurre la sucesioacuten

la intensidad e influencia relativa de los filtros va cambiando Mientras que la dispersioacuten y los factores abioacuteticos tienen un mayor peso en las primeras etapas de la sucesioacuten las interacciones planta-planta van adquiriendo una mayor impor-tancia en etapas maacutes tardiacuteas (Figura 1) Estos bu-cles de retroalimentacioacuten inherentes al sistema hacen que los filtros sean dinaacutemicos y que el tamantildeo de sus mallas se esteacute reajustando con-tinuamente (Fattorini y Halle 2004 Figura 1) No obstante el dinamismo de los filtros y las pertur-baciones externas que sufren continuamente los sistemas (contaminacioacuten erosioacutenhellip) hacen que la trayectoria del sistema no sea unidireccional y predecible sino que admite muacuteltiples trayecto-rias hacia estados alternativos estables (Temper-ton et al 2004 Figura 1)

III IDENTIFICACIOacuteN DE PROCESOS Y FACTORES QUE CONTROLAN EL ENSAMBLAJE DE LAS ESPECIES EN COMUNIDADES DE TALUDES DE INFRAESTRUCTURAS LINEALES

A partir de la teoriacutea de los filtros y de estudios re-cientes sobre la flora los patrones de colonizacioacuten y las caracteriacutesticas de las plantas de las comuni-dades de taludes identificamos a continuacioacuten los factores y procesos que controlan el ensamblaje de las especies en dichas comunidades La mayoriacutea de estos estudios hacen referencia a sistemas de taludes de carreteras de distintas regiones de la Peniacutensula Ibeacuterica

1 Disponibilidad de semillas

a Dispersioacuten

La colonizacioacuten espontaacutenea de los taludes de infra-estructuras lineales al igual que de otros ecosiste-mas fuertemente perturbados y desprovistos de ve-getacioacuten (volcanes minas a cielo abierto) depende en gran medida de la presencia en sus proximida-des de zonas de vegetacioacuten natural que suministran semillas (del Moral y Wood 1993 Kirmer y Mahn 2001 Novaacutek y Prach 2003 Bochet et al 2007a) Habitualmente la llegada por dispersioacuten de las se-millas desde las zonas de vegetacioacuten circundante (pool externo de especies locales Figura 1) cons-tituye la uacutenica fuente potencial de colonizacioacuten (se habla entonces de lsquosucesioacuten primariarsquo) Sin embargo en taludes recubiertos con una capa de tierra vege-tal esta constituye una fuente alternativa de semi-llas que pueden iniciar la colonizacioacuten (pool interno de especies locales Figura 1 se habla entonces de

lsquosucesioacuten secundariarsquo) No obstante estudios recien-tes demuestran que esta fuente de semillas es esca-sa con las praacutecticas actuales de manejo de la tierra vegetal utilizadas para la restauracioacuten de taludes (Mola et al 2011)

El eacutexito de llegada de las semillas a los taludes de-pende en gran medida de la distancia entre estos y las manchas circundantes de vegetacioacuten natural asiacute como de la capacidad de las especies locales para dispersarse a larga distancia (Figuras 2 y 3)

Figura 3 Terrapleacuten con orientacioacuten sur de la autopista Andash7 en la Costa del Sol entre las localidades de Estepona y Torreguadiaro En la foto se observa la cercaniacutea del talud a una mancha de vegetacioacuten natural consistente en matorrales de Chamaerops humilis y Pistacia lentiscus (Foto Santiago Soliveres Codina)

bull Distancia a la fuente de semillas

Es bien sabido que la probabilidad de las semillas de alcanzar una zona determinada es inversamente proporcional a la distancia a la fuente de semillas (Wilson 1993) Por ejemplo en una zona de vertede-ros mineros del Este de Alemania Saumlnger y Jetschke (2004) determinan que el porcentaje de especies co-munes entre el vertedero y las zonas circundantes de vegetacioacuten natural disminuye gradualmente (del 48 al 9) a medida que la distancia de estas uacuteltimas al vertedero aumenta (de 50 a 2000 m respectiva-mente) Bochet et al (2007a) llegan a conclusiones similares en un estudio realizado en taludes de la Autoviacutea Andash3 en la Comunidad Valenciana Estos au-tores sugieren que la colonizacioacuten se inicia a par-tir de los campos de cultivo y parches de matorral cercanos situados a menos de 150 m de distancia de los taludes No obstante no todas las especies

Estreacutes ambiental

Especiacioacuten migracioacuten

Perturbacioacuten

Filtro de dispersioacuten

Pool actual

Pool dispersivo

Pool ambiental

Pool interno de especiesPool externo de especies locales

Figura 1 Modelo dinaacutemico de los filtros que controlan el proceso de ensamblaje de las especies en una comunidad de plantas Modificado a partir de Fattorini y Halle (2004) Los procesos a gran escala como la especiacioacuten y la migracioacuten determinan el pool de especies locales que lsquoesperan a las puertasrsquo de una comunidad de plantas Para poder formar parte de un pool de especies establecidas (estado actual de la comunidad) las nuevas especies tienen que ser capaces de llegar [bien por dispersioacuten desde las zonas adyacentes (pool externo de especies locales) bien por estar presentes en el banco de semillas del suelo (pool interno de especies)] de adaptarse a las condiciones del medio (filtro abioacutetico) y tambieacuten de competir con las demaacutes especies establecidas (filtro bioacutetico) Los distintos filtros dependen unos de otros al estar conectados entre siacute a traveacutes del pool de especies establecidas Por ello los filtros tienen un caraacutecter dinaacutemico y el tamantildeo de su malla es constantemente reajustado como consecuencia de la existencia de procesos internos de retroalimentacioacuten asiacute como de la posible inter-vencioacuten de elementos externos al sistema (perturbaciones y estreacutes) Por ejemplo si las mallas del filtro abioacutetico lsquose abrenrsquo como consecuencia de las modificaciones de las condiciones del medio a medida que transcurre la sucesioacuten dejaraacute paso a un mayor nuacutemero de especies y consecuentemente el filtro bioacutetico tenderaacute a lsquocerrarsersquo al verse reducida la superficie de espacios disponibles para la llegada de semillas y posterior establecimiento de nuevas plaacutentulas Al contrario unas condiciones ambientales extremas provocaraacuten el cierre praacutecticamente total del filtro abioacutetico a la vez que se abriraacute el filtro bioacutetico por la falta de competencia entre las pocas especies establecidas capaces de soportar las condiciones adversas del medio

Filtro abioacutetico

Filtro bioacutetico

Figura 2 Terrapleacuten con orientacioacuten sur de la autopista Andash5 en la provincia de Madrid en la localidad de Arroyomolinos En la foto se observa en primer teacutermino el talud objeto de estudio y en segundo la cercaniacutea a una mancha de vegetacioacuten natural consistente en una dehesa de Retama sphaerocarpa (Foto Pablo Garciacutea-Palacios)

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MIRMECOCORIA

Ejemplos de dispersioacuten de semillas yo frutos (diaacutesporas) por hormigas (mirmecocoria) De izquierda a dere-cha y de arriba abajo hormiga negra (Messor barbarus) transportando un fruto de cadillo (Medicago sp) un fruto de bolsa de pastor (Capsella bursa-pastoris) una semilla de avena (Avena sp) un fruto de lechetrezna (Euphorbia helioscopia) y abajo transportando una semilla de plaacutetano (Platanus occidentalis) A la izquierda en esta uacuteltima imagen se puede apreciar a varias hormigas sobre un fruto de caracolillo (Medicago orbicularis) Autor Ignacio Mola

ANEMOCORIA

Capiacutetulo fructificado de Diente de Leoacuten (Taraxacum sp) Se puede apreciar coacutemo los frutos (cipselas) poseen un penacho plumoso (vilano) que permite su arrastre por el viento (anemocoria) y dispersarse a largas distancias Autor Ignacio Mola

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presentes en la vegetacioacuten circundante tienen meca-nismos de dispersioacuten adecuados para alcanzar las laderas de los taludes

bull Mecanismos de dispersioacuten

En el estudio previamente citado Bochet et al (2007a) determinan que solo el 60 de las especies presentes en las aacutereas de vegetacioacuten natural a me-nos de 150 m de los taludes son capaces de alcan-zarlos por dispersioacuten En Finlandia se han descrito patrones similares para taludes de carretera y viacuteas de tren rodeados por herbazales naturales (Tikka et al 2001)

Ademaacutes en una amplia gama de haacutebitats se ha constatado que las especies cuyas semillas son dis-persadas a larga distancia por el viento (anemoacuteco-ras) o por los animales (zooacutecoras excepto las dis-persadas por hormigas) tienen maacutes probabilidades de colonizar nuevas aacutereas que aquellas especies con mecanismos de dispersioacuten a corta distancia (disper-sadas por hormigas o lsquomirmecoacutecorasrsquo o dispersadas por la fuerza de la gravedad o lsquobaroacutecorasrsquo) (Hardt y Forman 1989 Dzwonko y Loster 1992 Burke y Grime 1996 Campbell et al 2003 Martiacutenez-Ruiz y Marrs 2007) La dispersioacuten de las semillas por el viento ha demostrado ser el mecanismo maacutes eficaz a la hora de colonizar los taludes de carretera Asiacute la propor-cioacuten de especies anemoacutecoras presentes en los talu-des es notablemente superior a la que se encuentra en las zonas de vegetacioacuten natural proacuteximas al talud y que ejercen como fuente de semillas (Bochet et al 2007a veacutease apartado III4 Tabla 3) Al contrario de lo esperado las especies zooacutecoras tienen pocas pro-babilidades de alcanzar los taludes Estos represen-tan ambientes inhoacutespitos para muchos animales puesto que estaacuten continuamente expuestos al ruido del traacutefico estaacuten vallados (para garantizar la seguri-dad vial) y carecen de aacuterboles que podriacutean servir de posaderos para los paacutejaros En cuanto a las especies que carecen de mecanismos de dispersioacuten a larga distancia su probabilidad de llegar al talud aunque baja aumenta con el tiempo (van Dorp et al 1997 Kirkman et al 2004)

En resumen al igual que en otros ambientes la dis-persioacuten representa un filtro que limita la disponibili-dad de semillas para la colonizacioacuten a corto o medio plazo de los taludes Solo las especies maacutes cercanas

a los taludes o capaces de dispersarse a mayores distancias tienen posibilidades de colonizar estas laderas de forma raacutepida

b Fijacioacuten(arrastredesemillas)

Distintos trabajos demuestran que el empobreci-miento de la vegetacioacuten en zonas caracterizadas por fuertes pendientes y procesos de erosioacuten intensos puede ser debido a la peacuterdida de semillas por es-correntiacutea y erosioacuten (Chambers y MacMahon 1994 Garciacutea-Fayos y Cerdagrave 1997) En pequentildeas cuencas abarrancadas del interior de Alicante las tasas anua-les de peacuterdida de semillas alcanzan un 13 (Garciacutea-Fayos et al 1995) Dado que la relacioacuten entre las peacuterdidas de semillas y la erosioacuten es exponencial (Garciacutea-Fayos 2004) la ocurrencia de eventos ex-traordinarios de lluvia durante el periodo de disper-sioacuten de las semillas podriacutea dificultar la regeneracioacuten de la vegetacioacuten en laderas sometidas a procesos de erosioacuten intensos como los taludes de infraestructu-ras lineales (veacutease Capiacutetulo 2)

Las caracteriacutesticas de las semillas tambieacuten influyen en su capacidad de resistir al arrastre por la erosioacuten Asiacute la segregacioacuten de una sustancia mucilaginosa que pega las semillas al suelo cuando se humede-cen disminuye notablemente la susceptibilidad de su arrastre por erosioacuten cuando su peso es inferior a 1 mg (Garciacutea-Fayos et al 2010)

2 Suelo (filtro abioacutetico)

a Importanciarelativadelosfiltrosdisponibilidaddesemillasfrenteacondicionesabioacuteticas

Aunque la colonizacioacuten de los taludes puede verse limitada por la restringida capacidad de dispersioacuten o de fijacioacuten al suelo de algunas especies distin-tos estudios han puesto de manifiesto la prepon-derancia del filtro abioacutetico frente al filtro de la dis-ponibilidad de semillas (dispersioacuten y fijacioacuten) Estos estudios demuestran que aunque las semillas de muchas especies son capaces de llegar a los taludes una serie de limitaciones ambientales intriacutensecas a estas laderas impiden su germinacioacuten o el estableci-miento de las plaacutentulas (Alborch et al 2003 Tormo et al 2006 Figura 4)

Figura 4 Experimento de adicioacuten de semillas en terraplenes de la Autoviacutea Andash3 a su paso por Requena (Comunidad Valenciana) que demuestra la preponderancia del filtro abioacutetico frente al filtro de la dispersioacuten Modificado a partir de Tormo et al 2006 Este experimento se basa en la idea de que si se antildeaden semillas de especies que no estaacuten presentes previamente en el talud pero siacute en su cercaniacutea y estas se estable-cen la limitacioacuten por la disponibilidad de semillas seriacutea maacutes importante para explicar su ausencia en dicho haacutebitat que la limitacioacuten por las condiciones del haacutebitat estudiado Se representa el porcentaje de establecimiento obtenido tras una siembra manual a pequentildea escala para un conjunto de especies ausentes de los taludes aunque presentes en las zonas circundantes de vegetacioacuten natural (especies lsquono exitosasrsquo en la colonizacioacuten espontaacutenea de los taludes) y para un conjunto de especies colonizadoras de los taludes que sirven de control (especies lsquoexitosasrsquo) Los resultados indican que a pesar de la siembra que asegura la llegada en una misma proporcioacuten de las semillas de todas las especies al talud las especies no exitosas muestran unas tasas de establecimiento mucho maacutes bajas que las especies exitosas (excepto para Mm y Pa) Estos resultados sugieren que los procesos posdispersivos (germinacioacuten y establecimiento de plaacutentulas) que dependen funda-mentalmente de las condiciones abioacuteticas tienen un papel maacutes limitante en la colonizacioacuten de los taludes que los procesos de dispersioacuten y de fijacioacuten de las semillas

b Condicionesgeneralesdelsuelodeterraplenesydesmontes(veacuteasetambieacutenCapiacutetulo4)

Las condiciones generales del suelo de los taludes habitualmente poco favorables al establecimiento de la vegetacioacuten representan el filtro abioacutetico funda-mental que condiciona en gran medida los resul-tados de la colonizacioacuten natural En la Tabla 1 se presentan datos de algunos paraacutemetros del suelo relevantes para el establecimiento de la vegetacioacuten

que han sido medidos en sistemas de taludes de distintas zonas de la Peniacutensula Ibeacuterica Dichas zo-nas corresponden a la autopista Andash7 a su paso por la Costa del Sol (Maacutelaga) con inviernos suaves y precipitaciones relativamente altas autoviacutea Andash3 a su paso por la zona de Requena (Valencia) con un clima continental y notable aridez y las carreteras Mndash12 y Mndash13 en la Comunidad de Madrid con un clima me-diterraacuteneo continental y una precipitacioacuten intermedia en relacioacuten con las anteriores

Ab- Avena barbata

Bu- Bromus rubens

Bd- Bromus diandrus

Ac- Anacyclus clavatus

Mm- Medicago minima

Pa- Plantago albicans

Be- Brachypodium retusum

Sc- Santolina chamaecyparissus

Mo- Medicago orbicularis

Gs- Genista scorpius

Pl- Plantago lanceolata

Ps- Plantago sempervirens

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Especies exitosas Especies no exitosas

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Tabla 1 Principales caracteriacutesticas del suelo y de la vegetacioacuten de distintos sistemas de taludes de la Peniacutensula Ibeacuterica (media plusmn error estaacutendar) Datos de Mola et al (2011) para Madrid de Valladares y Alonso (2001) para Maacutelaga y de Bochet et al (2010a) para Valencia

MADRID (CARRETERAS Mndash12 Y Mndash13)

MAacuteLAGA (AUTOPISTA Andash7)

VALENCIA (AUTOVIacuteA Andash3)

PROPIEDADES DE LA ZONA

Clima

Piso climaacutetico1

Ombroclima1

Mesomediterraacuteneo

Semiaacuterido

Termomediterraacuteneo

Subhuacutemedo

Mesomediterraacuteneo

Seco-semiaacuterido

Precipitacioacuten (mmantildeo)

500 900 450

Litologiacutea Arcosas Areniscas arenas arcillas y limos (sustrato aacutecido)

Margas (sustrato calizo)

PROPIEDADES DEL TALUD

TERRAPLEacuteN (N = 6)

DESMONTE (N = 9)

TERRAPLEacuteN (N = 21)

DESMONTE (N = 18)

TERRAPLEacuteN (N = 4)

DESMONTE (N = 4)

Edad (antildeos) 0 0 2 2 8 8

Pendiente (deg) 321 plusmn 08 312 plusmn 03 297 plusmn 37 396 plusmn 58 317 plusmn 23 363 plusmn 26

Orientacioacuten (deg)Norte este sur y oeste

Norte este sur y oeste

Norte y sur Norte y sur Norte y sur Norte y sur

Longitud (m) 118 plusmn 04 175 plusmn 09 119 plusmn 41 94 plusmn 45

Tratamiento TV ninguno TVHS HS HS HS

PROPIEDADES DEL SUELO

Arena () 6372 plusmn 268 6537 plusmn 549 3812 plusmn 746 3645 plusmn 107

Limo () 2011 plusmn 215 2259 plusmn 375 2748 plusmn 502 3423 plusmn 607

Materia orgaacutenica () 0148 plusmn 0023 00069 plusmn 0006 744 502 133 plusmn 019 lt0752 plusmn 006

Ntotal

() 0016 plusmn 002 0008 plusmn 0001 004 002 0072 plusmn 0004 0068 plusmn 0001P

asimilable (P2O5

mg100 g)181 plusmn 025 111 plusmn 368 443 103 250 plusmn 152 048 plusmn 010

K+ (mg100 g) 178 plusmn 06 167 plusmn 26 103 679

Compactacioacuten (kPa) 60 plusmn 10 1560 plusmn 1180

PROPIEDADES DE LA VEGETACIOacuteN

Cobertura vegetal () 000 plusmn 000 000 plusmn 000 803 plusmn 159 222 plusmn 224 594 plusmn 233 74 plusmn 56

Nuacutemero de especies 000 plusmn 000 000 plusmn 000 571 plusmn 93 336 plusmn 90 103 plusmn 84 100 plusmn 99

Indican que las diferencias entre terraplenes y desmontes de una misma zona geograacutefica son estadiacutesticamente signifi-cativas para la variable considerada ( P le 005 P le 001) TV = recubrimiento del talud con tierra vegetal HS= hidrosiembra con mezclas estaacutendares de semillas comerciales 1 Seguacuten clasificacioacuten de Rivas Martiacutenez (1983) 2 Maacutes bajo que el nivel de deteccioacuten del meacutetodo de anaacutelisis utilizado

Desde el punto de vista de las propiedades quiacutemi-cas del suelo los niveles de macronutrientes (N P K) medidos en los distintos sistemas de taludes son muy bajos (Tabla 1) Los niveles de macro-nutrientes y de materia orgaacutenica (propiedad con importantes implicaciones en la estructuracioacuten del suelo y en la capacidad de eacuteste para retener el agua) son inferiores a los niveles registrados en las zonas de vegetacioacuten natural proacuteximas a los talu-des Por ejemplo Mola et al (2011) constatan que el contenido en nitroacutegeno y materia orgaacutenica en el suelo de los terraplenes y desmontes de las carre-teras Mndash12 y Mndash13 (Madrid) al finalizar la obra y tras la aplicacioacuten de tierra vegetal en el caso de los terraplenes (Tabla 1) fueron del orden de 10 veces menores que los registrados en pastizales y mato-rrales xerofiacuteticos locales (Acosta 2005 Peco et al 2006) Estas marcadas diferencias en la fertilidad del suelo entre los taludes y las zonas proacuteximas de vegetacioacuten natural podriacutean explicar al menos en parte la escasa adaptacioacuten de las especies del pool local a las condiciones adversas del suelo de los taludes

Asimismo cabe destacar que las condiciones abioacuteti-cas de los desmontes son mucho menos favorables para el establecimiento de la vegetacioacuten que las de los terraplenes Mola et al (2011) encontraron di-ferencias significativas en el contenido en materia orgaacutenica foacutesforo y nitroacutegeno (Tabla 1) entre terraple-nes y desmontes recieacuten construidos de similar pen-diente y orientacioacuten en las carreteras Mndash12 y Mndash13 Los valores fueron superiores en los terraplenes ex-cepto para el foacutesforo Estas diferencias se debieron principalmente al extendido de tierra vegetal en los terraplenes el cual sin embargo no suele realizarse en los desmontes Bochet et al (2010a) obtuvieron resultados similares 8 antildeos despueacutes de la finali-zacioacuten de la obra en taludes de la Autoviacutea Andash3 de similar orientacioacuten y pendiente mostrando niveles superiores de materia orgaacutenica foacutesforo asimilable y nitroacutegeno en los terraplenes en comparacioacuten con los desmontes (Tabla 1)

Ademaacutes como consecuencia de los diferentes ma-teriales de origen entre desmontes y terraplenes (roca madre sin meteorizar frente a material no consolidado acumulado respectivamente) el nivel de compactacioacuten del suelo es muy superior en los desmontes En los desmontes de la Autoviacutea Andash3 en la Comunidad Valenciana se han llegado a medir niveles medios de compactacioacuten altiacutesimos (1560 kPa) 25 veces superiores a los niveles medidos en terraplenes de similar pendiente y orientacioacuten de la

misma localidad (Tabla 1 Figura 5) En desmontes de 50deg de pendiente formados sobre gneis en una zona de clima atlaacutentico en Galicia Cano y Montalvo (2003) registraron niveles de compactacioacuten del sue-lo algo maacutes bajos (300-400 kPa) pero cercanos al umbral que determina la capacidad de las raiacuteces de muchas especies herbaacuteceas no cultivadas para pe-netrar en un sustrato (Basset et al 2005 Monsalve et al 2010)

Figura 5 Diferencias en la estructura del suelo de terraplenes y desmontes de la Autoviacutea Andash3 a la altura de Requena (Valencia) En los primeros centiacutemetros de profundidad el nivel de com-pactacioacuten del suelo es mayor en los desmontes El aporte de materia orgaacutenica al suelo por las plantas (hojarasca y raiacuteces) confiere una mayor estructura al suelo de los terraplenes (Foto Esther Bochet)

c Disponibilidaddeaguaenelsuelo

El agua en el suelo y su disponibilidad para las plantas merece una mencioacuten especial dada su relevancia en las dos fases maacutes criacuteticas de la colo-nizacioacuten la germinacioacuten y la supervivencia de las plaacutentulas en las primeras etapas posgerminativas

En los taludes de zonas semiaacuteridas donde la dis-ponibilidad de agua es reducida (excepto en los te-rraplenes mejor orientados) se ha encontrado una relacioacuten consistente entre el eacutexito colonizador de las especies y la capacidad de estas para germinar raacute-pidamente en condiciones de estreacutes hiacutedrico (Bochet et al 2007b) Asiacute las especies capaces de colonizar espontaacuteneamente y de forma abundante los talu-des de la Autoviacutea Andash3 en la zona de Requena son aquellas que han demostrado tener la mayor tasa y velocidad de germinacioacuten en condiciones de estreacutes hiacutedrico (Figura 6)

TERRAPLEacuteN DESMONTE

113112

Proc

esos

eco

loacutegi

cos

y re

stau

raci

oacuten d

e la

cub

ierta

vege

tal

IacuteNDICE

Figura 6 Tasa (barras) y velocidad (liacuteneas nuacutemero de diacuteas hasta observar la primera germinacioacuten) de germinacioacuten en diferentes condiciones de estreacutes hiacutedrico de especies lsquoexitosasrsquo y lsquono exitosasrsquo en la colonizacioacuten espontaacutenea de los taludes Cuanto maacutes negativo es el potencial hiacutedrico mayor es el estreacutes Las especies exitosas muestran mayores tasas y velocidades de germinacioacuten que las especies no exitosas Modi-ficado a partir de Bochet et al 2007b

La distribucioacuten de la precipitacioacuten en el tiempo tam-bieacuten puede influir en el eacutexito de establecimiento de las especies anuales colonizadoras de taludes Asiacute Espigares y Peco (1993 1995) pusieron de manifies-to en un estudio sobre un amplio grupo de espe-cies arvenses de pastizal mediterraacuteneo respuestas diferentes en funcioacuten del momento en que se pro-duciacutean las precipitaciones otontildeales (Figura 7) Dado que muchas de estas especies son comunes en los taludes sobre sustratos aacutecidos en Madrid (Tabla 1) y que las comunidades de taludes suelen estar domi-nadas por especies anuales (veacutease apartado III4) la

respuesta de las plantas a la distribucioacuten temporal de la precipitacioacuten otontildeal podriacutea ser en gran me-dida responsable de las importantes fluctuaciones interanuales que se registran en la composicioacuten flo-riacutestica de estos ecosistemas en ambientes medite-rraacuteneos semiaacuteridos En un estudio a largo plazo (16 antildeos) Peco et al (2009) concluyeron ademaacutes que el peso de la semilla es un buen descriptor de la respuesta de las especies anuales a la precipitacioacuten y temperatura Asiacute las especies con semillas maacutes pesadas presentan ventajas en los antildeos con otontildeos poco lluviosos

Grupo 1 Grupo 2 Grupo 3

100 100 100

g

erm

inac

ioacuten

g

erm

inac

ioacuten

g

erm

inac

ioacuten

0 0 00 1 2 3 4 5 0 1 2 3 4 5 0 1 2 3 4 5

Tiempo (semanas) Tiempo (semanas) Tiempo (semanas)

Figura 7 Experimento en caacutemara de cultivo que pone de manifiesto las distintas respuestas en el tiempo de un amplio grupo de especies arvenses a la distribucioacuten de la precipitacioacuten otontildeal Tratamientos Lluvias otontildeales tempranas lluvia con temperatura y fotoperiacuteodo de sep-tiembre (liacutenea roja) Lluvias otontildeales tardiacuteas lluvia con temperatura y fotoperiacuteodo de noviembre (liacutenea azul) Los resultados indican que en los antildeos con lluvias tempranas en el otontildeo se ven favorecidas las especies del grupo 2 mientras que en otontildeos tardiacuteos se ven favorecidas las del grupo 3 El grupo 1 es poco sensible a estos cambios en la distribucioacuten de la precipitacioacuten con tasas de germinacioacuten elevadas para ambos tratamientos A partir de Espigares y Peco (1993)

Porc

enta

je d

e ge

rmin

acioacute

n

Diacutea

s ha

sta

la g

erm

inac

ioacuten

Potencial hiacutedrico del suelo (MPa)

Exitosa

No exitosa

0 20

40

60

80

10

0

0 -001 -005 -035

0 15

30

En cuanto a la supervivencia de las plaacutentulas tras la germi-nacioacuten Espigares y Peco (1995) determinaron que algunas

especies del experimento de la Figura 7 son particular-mente sensibles a una sequiacutea posgerminativa (Tabla 2)

Aira caryophyllea

Crepis virens

Vulpia ciliata

Capsella rubella

Crassula tillaea

Sagina apetala

Trifolium dubium

Vulpia muralis

Geranium molle

Tuberaria guttata

Galium murale

Myosotis stricta

Myosotis discolor

Anthyllis cornicina

Leontodon taraxa-coides

Galium parisiene

Spergularia purpurea

Andryala integrifolia

Bromus madritensis

Spergula pentandra

Crepis taraxacifolia

Trifolium tomentosum

Bromus hordeaceus

Plantago coronopus

Lathyrus angulatus

Vulpia unilateralis

Trifolium campestre

Aphanes microcarpa

Cerastium glomeratum

Papaver hybridum

Evax carpetana

Logfia gallica

Veronica arvensis

Biserrula pelecinus

Hypochoeris glabra

Poa annua

Trifolium cherleri

Plantago afra

Vicia lathyroides

Vulpia myuros

Campanula erinus

Logfia minima

Mibora minima

Stellaria media

Taeniatherum caput-medusae

Filago pyramidata

Trifolium glomeratum

Asteriscus aquaticus

Carduus tenuiflorus

Centaurea melitensis

Trifolium arvense

Erodium cicutarium

Trifolium cernuum

Vulpia membranacea

Corynephorus fasciculatus

Sisymbrium runcinatum

Polycarpon tetraphyllum

Cerastium brachypetalum

Arenaria leptoclados

Trifolium scabrum

Trifolium striatum

Bromus tectorum

Plantago loeflingii

Lophochloa cristata

Cerastium semidecandrum

Medicago minima

Trifolium gemellum

Scandix australis

Trifolium suffocatum

115114

Proc

esos

eco

loacutegi

cos

y re

stau

raci

oacuten d

e la

cub

ierta

vege

tal

IacuteNDICE

Tabla 2 Listado de especies sensibles a las sequiacuteas posgerminativas A partir de Espigares y Peco (1995) Experimento en caacutemara de cultivo para simular el efecto de una sequiacutea postgerminativa en la tasa de mortalidad (media plusmn error estaacutendar) de plaacutentu-las de herbaacuteceas anuales En la tabla aparece la mortalidad en macetas con sequiacutea posger-minativa frente al control con riego continuo En todos los casos en que hubo diferencias significativas la mortalidad fue menor en los controles

TRATAMIENTOS

ESPECIES CONTROL SEQUIacuteA P

Aphanes microcarpa 004 plusmn 001 065 plusmn 006

Arenaria leptoclados 008 plusmn 005 040 plusmn 009

Biserrula pelecinus 015 plusmn 004 044 plusmn 009

Bromus hordeaceus 000 plusmn 000 056 plusmn 019

Cerastium semidecandrum 008 plusmn 005 059 plusmn 008

Galium murale 008 plusmn 008 073 plusmn 009

Galium parisiense 019 plusmn 006 087 plusmn 004

Hypochoeris glabra 000 plusmn 000 054 plusmn 014

Polycarpon tetraphyllum 000 plusmn 000 041 plusmn 013

Sagina apetala 001 plusmn 001 077 plusmn 005

Spergularia purpurea 004 plusmn 005 051 plusmn 007

Trifolium arvense 000 plusmn 000 070 plusmn 018

Trifolium glomeratum 000 plusmn 000 086 plusmn 001

Trifolium suffocatum 002 plusmn 002 056 plusmn 009

Veronica arvensis 002 plusmn 001 052 plusmn 009

Vulpia ciliata 004 plusmn 001 033 plusmn 007

Vulpia membranacea 000 plusmn 000 080 plusmn 005

Vulpia muralis 002 plusmn 001 034 plusmn 007

Vulpia myuros 003 plusmn 001 048 plusmn 010

P le 005 P le 001

En resumen las malas condiciones del suelo de los taludes tanto quiacutemicas fiacutesicas como hidroloacutegicas confieren al filtro abioacutetico un papel fundamental en el ensamblaje de las especies de las comunidades de plantas de estas laderas Ademaacutes el caraacutecter maacutes

limitante del suelo de los desmontes en compara-cioacuten con el de los terraplenes queda reflejado en la menor cobertura vegetal y nuacutemero de especies regis-trados en los desmontes al poco tiempo de finalizar la obra (Tabla 1 Figura 8)

Figura 8 Diferencias en la densidad de cobertura vegetal al-canzada en un desmonte (izquierda) y un terrapleacuten (derecha) proacuteximos a la Autoviacutea Andash3 (Requena Valencia) Las diferencias se deben principalmente a la orientacioacuten (norte en este caso concreto) y condiciones del suelo maacutes favorables para el estab-lecimiento de las plantas en el terrapleacuten El establecimiento de las plantas en el desmonte orientado hacia el sur es praacutectica-mente nulo (Foto Esther Bochet)

3 Interacciones planta-planta (filtro bioacutetico)

a Importanciarelativadelosfiltroscondicionesabioacuteticasfrenteacondicionesbioacuteticas

Mientras que en ambientes semiaacuteridos con una re-ducida disponibilidad hiacutedrica para las plantas las condiciones abioacuteticas constituyen inicialmente el filtro maacutes importante a la hora de estructurar la composicioacuten floriacutestica de las comunidades de talu-des en ambientes climaacuteticos maacutes benignos son las interacciones entre plantas las que desempentildean un papel primordial Valladares et al (2008) emplea-ron una aproximacioacuten basada en la filogenia y en el anaacutelisis de rasgos funcionales de las especies (Webb et al 2002) para comparar las comunidades vegetales establecidas en los taludes de carretera de Maacutelaga (clima mediterraacuteneo benigno Tabla 1) y Valencia (clima mediterraacuteneo adverso Tabla 1) Dicho estudio sugiere la existencia de repulsioacuten fe-notiacutepica y por lo tanto exclusioacuten competitiva en las comunidades vegetales de los taludes de carre-tera de Maacutelaga Al contrario en las comunidades de Valencia sometidas a un alto estreacutes ambiental se aprecia una atraccioacuten fenotiacutepica entre las es-pecies coexistentes al compartir muchas de ellas unos mismos rasgos que les confieren la capacidad necesaria para poder establecerse en esos ambien-tes adversos

b Competenciafrenteafacilitacioacuten

Hasta la fecha existe poca informacioacuten sobre la natu-raleza de las interacciones planta-planta que se pro-ducen en las comunidades de taludes asiacute como sobre su importancia relativa (facilitacioacuten frente a compe-tencia) en el ensamblaje de las especies de dichas comunidades Dado que se ha descrito que la impor-tancia relativa de la competencia frente a la facilita-cioacuten disminuye a medida que aumenta el estreacutes abioacute-tico (Bertness y Callaway 1994 Maestre et al 2009) cabe esperar una elevada frecuencia de interacciones positivas en los ecosistemas de taludes al menos en las condiciones abioacuteticas maacutes limitantes para el esta-blecimiento de las plantas (por ejemplo clima aacuterido o semiaacuterido sustratos pobres y compactados)

4 El producto final del proceso de filtrado las especies colonizadoras y sus rasgos funcionales

Finalmente las especies que consiguen superar con eacutexito los sucesivos filtros que controlan el ensam-blaje de las especies constituyen el pool de especies colonizadoras de los taludes cuyos rasgos funciona-les reflejan su capacidad para llegar germinar esta-blecerse y competir en el talud

a Pooldeespeciesdelostaludes

Un estudio sinteacutetico sobre la flora y la ecologiacutea de las comunidades de taludes de las zonas de Maacutelaga (Autopista Andash7) Valencia (Autoviacutea Andash3) y Madrid (Ra-dial Rndash4 Autopista APndash36 y Autoviacutea Andash5) sentildeala que de forma general estas comunidades son muy ricas en especies y estaacuten compuestas por plantas her-baacuteceas principalmente (Valladares et al 2004) Sus valores de diversidad llegan a alcanzar los maacuteximos registrados en herbazales y pastizales de la Peniacutensu-la Ibeacuterica (Figura 9) Aunque las comparaciones entre haacutebitats basaacutendose en datos de diversidad o riqueza estaacuten sujetas a limitaciones y no son directamente comparables entre siacute los datos obtenidos en dicho estudio y otros (Garantildeeda-Bermejo et al 2002 Tena 2006 Garciacutea-Palacios et al datos no publicados) nos indican que transcurrido un tiempo relativamen-te pequentildeo las comunidades que se instalan de for-ma espontaacutenea en los taludes son ricas en especies lo que cuestiona la necesidad de introducir especies aloacutectonas como las que se seleccionan habitualmen-te en las hidrosiembras (veacutease apartado IV3) Ade-maacutes esta diversidad aumenta progresivamente con el tiempo (Tena 2006 Garciacutea-Palacios et al datos no publicados Figura 10)

117116

Proc

esos

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tal

IacuteNDICE

Figura 9 Iacutendice de diversidad floriacutestica (iacutendice de Shannon) de distintas comunidades de herbazales y pastizales de la Peniacutensula Ibeacuterica En rojo se destacan los valores promedio para herbazales de taludes de carreteras estudiadas por nosotros en Maacutelaga y Madrid Extraiacutedo de Valladares et al 2004

La mayoriacutea de las especies de las comunidades de taludes de Maacutelaga Madrid y Valencia estaacute presente en una sola de las tres localidades estudiadas (399 de un total de 587 especies) y tan solo el 10 es-taacuten presente en las tres localidades (Valladares et al 2004) No obstante estas uacuteltimas son las que maacutes abundancia media poseen a nivel local siendo las

menos abundantes las presentes en una sola loca-lidad Por ello aunque existan grandes diferencias desde el punto de vista de la composicioacuten floriacutestica entre las tres zonas en teacuterminos de dominancia re-lativa las diferencias son menores ya que tienden a predominar las mismas especies Muchas de ellas tambieacuten han sido encontradas de forma abundante

en otras comunidades de taludes de las provincias de Zamora y Madrid (Enriacutequez de Salamanca et al 2004) Salamanca (Martiacutenez-Ruiz et al 2003) y del sur de Francia (Heindl y Ullman 1991) en ambiente medi-terraacuteneo (pe Avena barbata Avena sterilis Bromus rubens Bromus tectorum Cichorium intybus Foenicu-lum vulgare Hordeum murinum Plantago albicans)

Figura 11 Segregacioacuten de inventarios por la composicioacuten floriacutestica en funcioacuten del tipo (Eje 1) y orientacioacuten (Eje 2) del talud Color azul terra-plenes color marroacuten desmontes colores oscuros norte colores claros sur Modificado a partir de Bochet y Garciacutea-Fayos 2004

A modo de ejemplo la Tabla 3 propone un listado de especies capaces de colonizar espontaacuteneamente con eacutexito unos taludes de la Autoviacutea Andash3 situados en la Comunidad Valenciana entre las localidades de El Rebollar y Venta del Moro Mientras que algunas especies tuvieron eacutexito en todos los taludes estu-diados en esta zona otras solo fueron capaces de establecerse en un tipo u orientacioacuten de talud

Eje 1

Eje

2

094

041

-012

-065

-118

-103 -029 045 119 193

Terrapleacuten norte

Desmonte norte

Terrapleacuten sur

Desmonte sur

Madrid Maacutelaga

1 2 3 4 5

Pastos mediterraacuteneos ecotono matorral (Madrid) Prados de siega huacutemedos (Picos de Europa)

Herbazales en taludes en carretera 4-16 antildeos (Madrid) Pastos en dehesa Quercus pyrenaica (Leoacuten)

Prados de siega huacutemedos (Pirineos) Pastizales en quejigares (Navarra)

Pastos semiaacuteridos (Salamanca) Herbazales en quejigares (Navarra)

Pastos en dehesa Quercus ilex semiagostantes (Salamanca) Pastos terofiacuteticos (Zamora)

Pastos psicroxerofiacuteticos (Salamanca) Espartales sobre calizas (Jaeacuten) Espartales sobre yesos (Jaeacuten)

Herbazales en taludes de carretera 2-3 antildeos (Maacutelaga) Pastizales vallicares (Salamanca)

Herbazales en taludes de carretera 1-2 antildeos (Maacutelaga) Prados de siega en zonas secas (Pirineos) Prados de siega muy manejados (Pirineos)

Prados de siega (Zamora)

Figura 10 Variacioacuten en la riqueza de especies en funcioacuten de la edad de las comunidades de dos sistemas distintos de taludes de carretera situados en las provincias de Madrid y Maacutelaga Datos de Garciacutea-Palacios et al (datos no publicados)

La composicioacuten floriacutestica de las comunidades tam-bieacuten variacutea entre terraplenes y desmontes y entre orientaciones norte y sur (Martiacutenez-Ruiz et al 2003 Bochet y Garciacutea-Fayos 2004) como consecuencia de

las distintas influencias relativas de los filtros eco-loacutegicos sobre las especies y sus rasgos funcionales (Figura 11)

Nordm

espe

cies

m2

Nordm

espe

cies

m2

18

16

14

12

10

8

6

4

2

0

18

16

14

12

10

8

6

4

2

0

aa

a

b

b

b

Referencialt0-2 antildeos 7-9 antildeos 20 antildeos Referencialt0-2 antildeos 7-9 antildeos 20 antildeos

119118

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IacuteNDICE

GEacuteNERO TRIFOLIUM

De las 60 especies de treacuteboles (Trifolium) descritas en Flora Ibeacuterica (Muntildeoz Rodriacuteguez et al 2000) 39 aparecen en el cataacutelogo de la flora de Madrid (Loacute-pez Jimeacutenez 2007) En 15 parcelas de muestreo en taludes de las autopistas M-12 y M-13 se han identificado 18 es decir el 25 de la riqueza ibeacuterica y maacutes del 46 de la de la Comunidad de Madrid Estas cifras ponen en evidencia lo diversificado de este geacutenero botaacutenico en la Peniacutensula Ibeacuterica y lo bien representado en la flora presente en los taludes de carretera Se presentan catorce especies de este geacutenero detectadas en taludes de carretera

Muntildeoz Rodriacuteguez A JA Devesa y S Talavera 2000 Trifolium in Castroviejo et al (Ed) Flora Ibeacuteri-ca Plantas vasculares de la Peniacutensula Ibeacuterica e Islas Baleares 7(2)646-719 CSIC Madrid

Loacutepez Jimeacutenez N 2007 Las plantas vasculares de la Comunidad de Madrid Cataacutelogo floriacutestico Claves dicotoacutemicas y estudio detallado de la familia Com-positae Giseke Tesis Doctoral Universidad Complu-tense de Madrid

De izquierda a derecha y de arriba abajo treacutebol blanco (Trifolium repens) treacutebol (T scabrum) treacutebol velloso (Trifolium hirtum) fenarda (T campestre) jopito (T angustifolium) pie de liebre (T arvense) siempreviva (T tomentosum) treacutebol (T glomeratum) y rabo de gato (T cherleri) Autor Ignacio Mola

121120

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IacuteNDICE

Bajo estas liacuteneas de izquierda a derecha y de arriba abajo treacutebol (Trifolium strictum) estrella (T stella-tum) treacutebol (T cernuum) y treacutebol estriado (T stria-tum) En la paacutegina siguiente berrillo (T pratense) Autores Miguel Aacutengel Casado e Ignacio Mola

123122

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IacuteNDICE

Tabla 3 Listado de especies con sus mecanismos de dispersioacuten respectivos que colonizan espontaacuteneamente y de forma abundante los distintos tipos de taludes de la Autoviacutea A3 situados entre las localidades de El Rebollar y Venta del Moro (Comunidad Valenciana) Esta zona se caracteriza por un clima continental semiaacuterido y un sustrato de margas calizas

ESPECIES DISPERSIOacuteN DS DN TS TN

Alyssum simplex Baroacutecora + + + +

Anacyclus clavatus Baliacutestica + + + +

Avena barbata Anemoacutecora + + + +

Bromus rubens Anemoacutecora + + + +

Centaurea aspera Zooacutecora + + + +

Cichorium intybus Baliacutestica + + + +

Convolvulus arvensis Baroacutecora + + + +

Diplotaxis erucoides Baroacutecora + + + +

Euphorbia serrata Mirmecoacutecora + + + +

Hordeum murinum subsp leporinum Anemoacutecora + + + +

Sonchus oleraceus Anemoacutecora + + + +

Scabiosa simplex Anemoacutecora + + + +

Bromus tectorum Anemoacutecora + + +

Crepis vesicaria Anemoacutecora + + +

Erodium cicutarium Baroacutecora + + +

Calendula arvensis Zooacutecora + +

Carduus pycnocephalus Anemoacutecora + +

Filago pyramidata Anemoacutecora + +

Medicago minima Zooacutecora + +

Plantago albicans Baroacutecora + +

Scorzonera laciniata Anemoacutecora + +

Silene nocturna Baliacutestica + +

Reseda phyteuma Baliacutestica + +

Pallenis spinosa Anemoacutecora + +

Eryngium campestre Anemoacutecora + +

Carthamus lanatus Anemoacutecora +

Crepis foetida Anemoacutecora +

ESPECIES DISPERSIOacuteN DS DN TS TN

Foeniculum vulgare subsp piperitum Baroacutecora +

Linaria simplex Baliacutestica +

Papaver rhoeas Baliacutestica +

Senecio gallicus Anemoacutecora +

Senecio vulgaris Anemoacutecora +

Avena sterilis Anemoacutecora +

Erodium ciconium Baroacutecora +

Erodium malacoides Baroacutecora +

Hirschfeldia incana Baroacutecora +

Reseda undata Baroacutecora +

Aegilops geniculata Zooacutecora +

Aegilops triuncialis Zooacutecora +

Genista scorpius Baroacutecora +

Santolina chamaecyparissus subsp squarrosa Baliacutestica +

b Rasgosfuncionalesdelasespeciescolonizadoras

Seguacuten predice la teoriacutea los rasgos funcionales de las especies colonizadoras de taludes deberiacutean re-flejar las aptitudes de las plantas para superar las barreras que controlan el ensamblaje de las especies en estas laderas (dispersioacuten fijacioacuten germinacioacuten establecimiento y competencia)

Las comunidades de taludes tiacutepicas de las primeras etapas sucesionales se caracterizan por poseer una alta proporcioacuten de especies anuales de crecimiento raacutepido de caraacutecter ruderal y arvense (Valladares et al 2004 Figura 12) Por ejemplo las comunidades de taludes de Maacutelaga estaacuten compuestas en los prime-ros antildeos por un 84 de especies anuales (teroacutefitas seguacuten la clasificacioacuten de Raunkiaer 1934) frente a un 11 de especies herbaacuteceas vivaces (hemicriptoacutefitas seguacuten la clasificacioacuten de Raunkiaer 1934) A su vez un 40 de las especies son ruderales y arvenses

Figura 12 Primeras etapas de la sucesioacuten en un terrapleacuten de la Autoviacutea Andash3 (Requena Valencia) Una de las especies pioneras de mayor eacutexito en la colonizacioacuten de este tipo de talud es la especie anual Diplotaxis erucoides (flor blanca) (Foto Esther Bochet)

frente a un 25 de especies propias de pastizales y herbazales nitroacutefilos (Matesanz et al 2004)

Tabla 3 Listado de especies con sus mecanismos de dispersioacuten respectivos que colonizan espontaacuteneamente y de forma abundante los distintos tipos de taludes de la Autoviacutea A3 situados entre las localidades de El Rebollar y Venta del Moro (Comunidad Valenciana) Esta zona se caracteriza por un clima continental semiaacuterido y un sustrato de margas calizas (Continuacioacuten)

DN desmonte norte DS desmonte sur TN terrapleacuten norte TS terrapleacuten sur Mecanismos de dispersioacuten anemoacutecora por el viento baroacutecora por la gravedad zooacutecora por los animales excepto por las hormigas mirmecoacutecoras por las hormigas baliacutesticas por lsquocatapultarsquo Modificado a partir de Bochet et al 2010b

DN desmonte norte DS desmonte sur TN terrapleacuten norte TS terrapleacuten sur Mecanismos de dispersioacuten anemoacutecora por el viento baroacutecora por la gravedad zooacutecora por los animales excepto por las hormigas mirmecoacutecoras por las hormigas baliacutesticas por lsquocatapultarsquo Modificado a partir de Bochet et al 2010b

125124

Proc

esos

eco

loacutegi

cos

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stau

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oacuten d

e la

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vege

tal

IacuteNDICE

Al igual que en otros ecosistemas degradados las especies pioneras en la colonizacioacuten de taludes de infraestructuras lineales se caracterizan tambieacuten por un sistema de dispersioacuten eficaz a larga distancia que les permite llegar desde las aacutereas circundan-tes de vegetacioacuten natural y de mecanismos de fi-jacioacuten al sustrato Asiacute en taludes de ocho antildeos de edad en la Autoviacutea Andash3 (Comunidad Valenciana) se ha observado una sobrerrepresentacioacuten de especies anemoacutecoras en relacioacuten con las zonas adyacentes de vegetacioacuten natural (Bochet et al 2007a Tabla 3) Tambieacuten en laderas erosionadas de una zona semiaacuterida de Teruel con caracteriacutesticas similares y

que comparten muchas especies con los desmontes de la Autoviacutea Andash3 estudiados en Valencia se han encontrado preferentemente especies capaces de dispersarse a larga distancia y de producir muciacutelago al contacto con el agua (Bochet et al 2009) Estas especies se distinguen de las de las zonas circun-dantes de vegetacioacuten natural que son incapaces de superar los filtros por su gran inversioacuten de recursos en la produccioacuten de semillas A medida que avanza la sucesioacuten cabe esperar que aumente la proporcioacuten de especies que disponen de estrategias de resis-tencia con una mayor inversioacuten por ejemplo en los oacuterganos subterraacuteneos (Guerrero-Campo et al 2008)

IV APLICACIOacuteN A LA RESTAURACIOacuteN

La restauracioacuten puede considerarse como un esfuerzo de manipulacioacuten consciente de los filtros ecoloacutegicos con el objetivo de acelerar o dirigir el proceso de coloniza-cioacuten vegetal (Figura 13) Por lo tanto la identificacioacuten de

La intervencioacuten activa sobre los filtros es necesaria cuando los procesos de colonizacioacuten transcurren demasiado lentamente para poder alcanzar en un plazo aceptable los objetivos de la restauracioacuten o cuando el sistema ha sobrepasado un umbral de irreversibilidad (Halle y Fattorini 2004) Este uacuteltimo determina la capacidad del sistema para recuperarse por siacute mismo La perturbacioacuten sufrida por los ecosistemas durante las obras es tal que en la mayoriacutea de los casos se supera el umbral de irreversibilidad

A continuacioacuten y sobre la base de los resultados obtenidos por distintos grupos de investigacioacuten se describen en distintos tipos de actuaciones que permiten contrarrestar el efecto de los filtros fa-voreciendo la entrada y el establecimiento de las plantas (Figura 13)

1 Proximidad y calidad de la vegetacioacuten natural circundante

La presencia de aacutereas de vegetacioacuten natural en la proximidad de los taludes que actuacutean como fuen-tes de semillas puede ayudar a paliar los efectos del filtro de la dispersioacuten puesto que favorece la entrada espontaacutenea de especies desde la vegeta-cioacuten circundante y acelera los procesos de coloni-zacioacuten en el talud Cuanto maacutes proacuteximos esteacuten los taludes de la matriz de vegetacioacuten circundante mayor seraacute la llegada y disponibilidad de semillas en el talud

Matesanz et al (2006) demuestran la efectividad de la colonizacioacuten espontaacutenea desde las zonas cercanas de matorral y cultivos en unos terraple-nes de la Autopista Andash7 en Maacutelaga con pendientes inferiores a 27deg suelos relativamente ricos y airea-dos y con un clima mediterraacuteneo subhuacutemedo Es-tos autores obtuvieron en terraplenes no tratados de reciente construccioacuten y al menos durante los dos primeros antildeos una cobertura vegetal y una riqueza de especies elevadas similares a las que se alcanzaron aplicando una hidrosiembra con una mezcla de especies comerciales (Figura 14)

los filtros ecoloacutegicos maacutes limitantes para el estableci-miento de la vegetacioacuten como paso previo a la toma de decisiones en un proyecto determinado es sumamente importante para el eacutexito de cualquier restauracioacuten

Pool local

Pool dispersivo

Pool actual

Limitaciones abioacuteticas

Incapaces de germinar y establecerse

Incapaces de llegar

Incapaces de competir

Adicioacuten de especies

Intervencioacuten en las interacciones bioacuteticas

Pool ambiental

- Aporte de tierra vegetal mulches fertilizantes enmiendas orgaacutenicas

- Cambios topograacuteficos

- Proximidad de la vegetacioacuten natural

- Aporte de tierra vegetal

- Seleccioacuten adecuada de especies para hidrosiembras plantaciones

- Eliminacioacuten de ganado

ENSAMBLAJE DE LAS ESPECIES Y FILTROS MANIPULACIOacuteN DE LOS FILTROS (RESTAURACIOacuteN)

Modificacioacuten del medio

Limitaciones bioacuteticas

Limitaciones por dispersioacuten

Figura 13 Proceso de seleccioacuten y ensamblaje de las especies en comunidades a traveacutes de los tres filtros ecoloacutegicos y posibles medidas de restauracioacuten mediante manipulacioacuten de dichos filtros Los rectaacutengulos representan los pools de especies los ciacuterculos los filtros y las flechas gruesas las posibles intervenciones del hombre para contrarrestar el efecto de los filtros

0

2

4

6

8

10

12

14

16

Nuacutem

ero

de e

spec

ies

m2

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80

100

2003 2004

Cob

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ra v

eget

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)

Antildeo de seguimiento

A) B)

2003 2004Antildeo de seguimiento

Con hidrosiembra Sin hidrosiembra

0

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8

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12

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16

Nuacutem

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60

80

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2003 2004

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)

Antildeo de seguimiento

A) B)

2003 2004Antildeo de seguimiento

Con hidrosiembra Sin hidrosiembra

Figura 14 Influencia de la hidrosiembra (frente a la restauracioacuten pa-siva) en la cobertura vegetal y riqueza de especies de terraplenes de la Autoviacutea Andash7 (Maacutelaga) No se aprecian grandes diferencias entre los tratamientos 2 y 3 antildeos tras la hidrosiembra (2003 y 2004 respec-tivamente) Modificado a partir de Matesanz et al 2006

A

B

127126

Proc

esos

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loacutegi

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stau

raci

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vege

tal

IacuteNDICE

La importante contribucioacuten de las manchas cir-cundantes de vegetacioacuten natural a la colonizacioacuten de los taludes tambieacuten queda reflejada en las Fi-guras 15 y 16 en las que se aprecian cambios en la composicioacuten floriacutestica de las comunidades de terraplenes de 0-2 7-9 y 20 antildeos de las au-topistas de Madrid y de Maacutelaga Los resultados

de este estudio (Garciacutea-Palacios et al datos no publicados) sugieren que la cercaniacutea de manchas formadas por dehesas de Retama sphaerocarpa en Madrid y matorrales de Chamaerops humilis y Ulex parviflorus en Maacutelaga constituye uno de los mo-tores principales para guiar la sucesioacuten de estas comunidades

Figura 15 Cambios en la composicioacuten floriacutestica en distintos taludes de Madrid (A) y Maacutelaga (B) de edades comprendidas entre 0 y 20 antildeos Tambieacuten se incluye la composicioacuten floriacutestica de la vegetacioacuten natural circundante llamada lsquoreferenciarsquo en ambas localidades (dehesa de Retama sphaerocarpa para Madrid y matorrales de Chamaerops humilis y Ulex parviflorus para Maacutelaga) Los dos ejes (CAP 1 y CAP 2) son el resultado de una ordenacioacuten (anaacutelisis canoacutenico de coordenadas principales) realizada para representar graacuteficamente la composicioacuten de la vegetacioacuten La distancia entre puntos representa la similitud en la composicioacuten floriacutestica Datos de Garciacutea-Palacios et al (datos no publicados)

Bochet et al (2007a) recomiendan que durante la ejecucioacuten de las obras se mantenga una banda de vegetacioacuten natural de al menos 20 m de ancho en la cabecera o al pie de los taludes Ademaacutes de tener implicaciones beneficiosas evidentes en el caso de la restauracioacuten pasiva estas medidas contribuyen tambieacuten a mejorar los resultados de los proyectos

de restauracioacuten activa acelerando el proceso de co-lonizacioacuten En caso de ausencia de vegetacioacuten natu-ral circundante o de llegada insuficiente de semillas al talud se pueden aplicar otras medidas que per-mitan incorporar las semillas de forma activa como la adicioacuten de tierra vegetal o la hidrosiembra (apar-tados IV2 y 3 respectivamente)

Figura 16 Cronosecuencia de terraplenes de distinta edad (de 0 a 20 antildeos) en diversas autopistas de las provincias de Madrid y Maacutelaga Las uacuteltimas dos fotos representan las zonas circundantes de vegetacioacuten natural una dehesa de Retama sphaerocarpa para Madrid y matorrales de Chamaerops humilis y Pistacia lentiscus para Maacutelaga (Fotos Santiago Soliveres Codina y Pablo Garciacutea-Palacios)

MADRID MAacuteLAGA

0-2

7-9

gt20

referencia

A B02

01

00

-01

-02

02

01

00

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-02

-02 -01 -01 00 00 01 01 02 02 -02 -01 -01 00 00 01 01 02 02

CAP1 CAP1

CA

P2

0-2 antildeos7-9 antildeos20 antildeosReferencialt

129128

Proc

esos

eco

loacutegi

cos

y re

stau

raci

oacuten d

e la

cub

ierta

vege

tal

IacuteNDICE

2 Mejora del suelo y banco de semillas

Las limitaciones abioacuteticas pueden ser suplidas mediante distintas teacutecnicas de restauracioacuten que consisten en la aplicacioacuten en los taludes de mul-ches (Brofas y Varelides 2000) fertilizantes (Pe-tersen et al 2004) enmiendas orgaacutenicas (de Ona y Osorio 2006) o tierra vegetal (Balaguer 2002) (veacutease Capiacutetulo 63) Entre las diferentes medidas

Un gran nuacutemero de estudios en ambientes de ca-racteriacutesticas muy diversas destaca los beneficios de esta teacutecnica para la restauracioacuten de taludes de infraestructuras lineales (Albaladejo et al 2000 Holmes 2001 Bowen et al 2005) Por ejemplo Tor-mo et al (2007) obtienen en taludes de la N-330 en Utiel (Valencia) que al menos durante los dos primeros antildeos las coberturas vegetales en terra-plenes en los que se ha aportado tierra vegetal son superiores que en terraplenes-control sin tierra vegetal (Figura 17) Las parcelas no tratadas tarda-ron tres antildeos en alcanzar valores medios de cober-tura vegetal equivalentes a los que se registraron el primer antildeo en las parcelas con tierra vegetal No obstante en esta regioacuten con condiciones climaacuteticas severas las coberturas vegetales alcanzadas en el primer antildeo tras la aplicacioacuten de la tierra vegetal (35) son insuficientes para poder garantizar un

No obstante el eacutexito de la aplicacioacuten de la tierra ve-getal puede ser muy variable dependiendo de su ma-nejo durante las operaciones de decapado acopio y extendido del suelo (Balaguer 2002) Mola et al (2011) demuestran que el aporte de semillas a los taludes mediante el banco natural de semillas conte-nido en la tierra vegetal es escaso con las praacutecticas actuales de manejo de la tierra vegetal y sugieren que la influencia positiva de la tierra vegetal en la revegetacioacuten de los taludes se debe en gran medida a la mejora de las condiciones abioacuteticas del sustrato

No obstante los estudios sobre la estructura y di-naacutemica de bancos de semillas en otros ambientes

proporcionan informaciones uacutetiles para un manejo maacutes adecuado de la tierra vegetal en los ambientes de taludes de carretera con repercusiones benefi-ciosas sobre el rendimiento del banco de semillas Por ejemplo Traba et al (2006) constatan en distin-tos ecosistemas de ambientes aacutecidos mediterraacuteneos que la mayoriacutea de las semillas viables se encuentran en los primeros 5 cm de profundidad del suelo (Fi-gura 19) Otros estudios realizados en ecosistemas deseacuterticos o en canteras de mineriacutea apoyan estas observaciones puntualizando que el 80-90 de las semillas viables se encuentran en la capa maacutes super-ficial del suelo es decir en los primeros 2 cm (Tacey y Glossop 1980 Kemp 1989)

existentes la adicioacuten de tierra vegetal presenta la ventaja antildeadida de ser capaz de contrarrestar al mismo tiempo el filtro de la dispersioacuten En efecto la tierra vegetal cumple la doble funcioacuten de a) mitigar las malas condiciones abioacuteticas del sue-lo por su mayor contenido en materia orgaacutenica y microorganismos y b) aportar semillas al talud mediante el banco natural de semillas contenido en el suelo

Figura 17 Influencia de la aplicacioacuten de tierra vegetal en la densidad de vegetacioacuten (media plusmn error tiacutepico) alcanzada a lo largo de 4 antildeos en parcelas experimentales en terraplenes de la carretera N-330 (Utiel Comunidad Valenciana) Los taludes se acabaron de construir en septiem-bre de 2003 P le 005 P le 001 ns diferencia no significativa estadiacutesticamente Modificado a partir de Tormo et al 2009

control eficiente de la erosioacuten en caso de lluvias intensas (Gyssels et al 2005 Bochet et al 2010a) En estas condiciones es aconsejable optar por un tratamiento que combina el aporte de tierra vegetal y la hidrosiembra de semillas de especies cuidado-samente seleccionadas para garantizar el eacutexito de la restauracioacuten (Bochet et al 2010a veacutease aparta-do IV3) Valladares et al (2004) tambieacuten ponen de manifiesto la eficacia de la tierra vegetal al menos durante los tres primeros antildeos en desmontes hi-drosembrados de baja pendiente (26deg) de la au-topista Andash7 (Maacutelaga) (Figura 18) Por otro lado el beneficio a largo plazo del aporte de tierra vege-tal ha sido evidenciado por Wali (1999) al obser-var 45 antildeos despueacutes del tratamiento un grado de evolucioacuten de la vegetacioacuten varias deacutecadas maacutes avanzado en taludes de mineriacutea tratados con tie-rra vegetal que en aquellos no tratados

Figura 18 El efecto de la adicioacuten de tierra vegetal en la cubierta vegetal en un desmonte hidrosembrado de la Autopista de la Costa del Sol (Maacutelaga) fue muy patente desde un principio asiacute como tres antildeos despueacutes del tratamiento La cobertura en las zonas con tierra vegetal fue muy superior a la de las zonas sin tierra vegetal durante todo el periodo de seguimiento (gt3 antildeos) Extraiacutedo de Valladares et al 2004

Hidrosiembra en desmonte lsaquo26deg

Superficie con y sin tierra vegetal

Autopista de la Costa del Sol

(Estepona Maacutelaga 2001-2002)

Vegetacioacuten en desmonte

Con tierra cobertura 100

Sin tierra cobertura 403 antildeos

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IacuteNDICE

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Primavera 96 Otontildeo 96 Primavera 97

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Primavera 96 Otontildeo 96 Primavera 97

A

Nordm

sem

illas

1800

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1200

1000

800

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400

200

0

Figura 19 Nuacutemero de semillas por sonda (16 cm2) en distintos ecosistemas de ambientes aacutecidos mediterraacuteneos (verde pastizales pastoreados azul matorrales sin pastoreo) Datos correspondientes a una superficie de muestreo de 320 cm2 (20 sondas de 16 cm2 en cada parcela) y una profundidad de suelo de 0-5 cm (graacutefica A) y de 5-10 cm (graacutefica B) Noacutetense las diferentes escalas de cada graacutefica Datos de Traba et al 2006

Por otro lado se ha constatado en ambientes medi-terraacuteneos que la cantidad de semillas viables en el banco del suelo presenta un ciclo anual con un maacutexi-mo durante el verano antes de que las primeras lluvias de otontildeo hayan provocado la germinacioacuten de la mayor parte de las anuales y un miacutenimo al prin-cipio de la primavera antes de que hayan producido semillas las especies vernales (Ortega et al 1997) Esta fluctuacioacuten es tanto mayor cuanto mayor es el grado de perturbacioacuten del sistema Asiacute por ejemplo

Figura 20 Media del nuacutemero de semillas viables en otontildeo y primavera en los 10 cm superficiales de suelo Las muestras fueron recogidas en parcelas pastoreadas de zonas altas y bajas de ladera a lo largo de un gradiente altitudinal en la Sierra de Guadarrama (Madrid) Extraiacutedo de Ortega et al 1997

Asimismo diversos estudios indican que el espesor del suelo influye en la germinacioacuten de las semillas con una profundidad oacuteptima igual o inferior a 2 cm (Andrade et al 1997 Torma y Hodi 2000 Traba et al 2004) Estos estudios demuestran que espesores de suelo excesivos superiores a 10 cm pueden incluso inhibir la germinacioacuten de las semillas o la emergen-cia de los brotes

En resumen estos datos indican que para conse-guir un rendimiento oacuteptimo del banco de semillas en la tierra vegetal se debe realizar un decapado superficial del terreno a desbrozar (de los primeros 5 cm en lugar de los 20-25 cm que recomiendan los proyectos) al final del verano y antes de las primeras lluvias y se debe aplicar una capa muy poco profunda de tierra vegetal (5 cm en lugar de los 30-35 cm que recomiendan los proyectos) No obstante se necesita una maquinaria apropiada para garantizar un decapado superficial del suelo

3 Seleccioacuten de especies adaptadas a las condiciones de la zona a restaurar

Para mitigar los efectos de una restringida disponibi-lidad de semillas y favorecer el proceso de sucesioacuten en los taludes se recurre muy frecuentemente a la adicioacuten antroacutepica de semillas mediante hidrosiembra (veacutease Capiacutetulo 74) Desafortunadamente las espe-cies seleccionadas para las hidrosiembras se limitan habitualmente a un reducido nuacutemero de especies disponibles en el mercado (especies comerciales) y que se recomiendan indiscriminadamente para cualquier escenario geograacutefico edaacutefico o climaacutetico (Balaguer 2002) Sin embargo el eacutexito de las hidro-siembras reside en gran medida en una seleccioacuten apropiada de las especies a sembrar Estas tienen que ser capaces de superar los filtros ecoloacutegicos que controlan su establecimiento en el talud Una vez superado el filtro de la dispersioacuten gracias a la hidro-siembra la incapacidad de muchas de las especies

cuando se comparan pastizales a lo largo de un gra-diente altitudinal de 500 a 1800 m en la vertiente sur de la sierra de Guadarrama se encuentra que los pastos dominados por anuales presentan una alta fluctuacioacuten intraanual que va desde 1300 semillas viables16 cm2 en otontildeo a 250 semillas a principios de primavera mientras que los pastos suprafores-tales presentan una fluctuacioacuten desde 300 semillas viables16 cm2 a 200 en las mismas eacutepocas del antildeo respectivamente (Figura 20)

Nordm

sem

illas

00

01 m

2

642 891 1215 1449 1719

Zona alta

Zona baja

Otontildeo

Primavera

Altitud (m)

15000

10000

5000

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15000

10000

5000

0

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oacuten d

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vege

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IacuteNDICE

incluidas en las mezclas de semillas comerciales de superar el filtro abioacutetico es una de las causas maacutes frecuentes de fracaso Como alternativa se ha propuesto el uso de especies locales (del pool lo-cal externo Figura 1) tras comprobarse en distintos ambientes mediante siembras experimentales que se establecen mejor que las especies comerciales usadas en mezclas estaacutendares (Paschke et al 2000 Prach 2003 Tinsley et al 2006) Desde el punto de vista de la restauracioacuten del capital natural en forma de bienes y servicios el uso de especies locales es altamente recomendable por sus ventajas ecoloacutegicas y geomorfoloacutegicas tales como la preservacioacuten de la integridad geneacutetica la conservacioacuten de la diversidad local la compatibilidad con otras especies locales y el control eficiente de la erosioacuten (Petersen et al 2004 Tinsley et al 2006 Steinfeld et al 2007)

No obstante la teoriacutea sobre los filtros ecoloacutegicos nos advierte que el uso de especies lsquolocalesrsquo (del pool lo-cal externo Figura 1) no siempre garantiza el eacutexito de la revegetacioacuten El experimento de Tormo et al (2006) corrobora esta idea dado que varias de las especies sembradas del pool local no fueron capaces de esta-blecerse en las condiciones limitantes de los taludes (Figura 4) Por ello Bochet et al (2010b) proponen una metodologiacutea de seleccioacuten de especies basada en la idea de que aquellas especies capaces de co-lonizar espontaacuteneamente y de forma abundante los taludes son especies idoacuteneas que estaacuten adaptadas

a las condiciones locales de estos y que presentan por tanto ciertas garantiacuteas de eacutexito para la revege-tacioacuten de estas laderas El proceso de seleccioacuten se divide en dos fases En primer lugar la identificacioacuten mediante inventarios floriacutesticos de las especies que colonizan con eacutexito los taludes y en segundo lugar la validacioacuten del proceso de seleccioacuten mediante siem-bras experimentales a pequentildea escala con las espe-cies identificadas Esta segunda fase es importante tambieacuten para descartar problemas de competencia entre especies seleccionadas para las mezclas (Ma-tesanz y Valladares 2007) Aplicando este meacutetodo a taludes de la comarca de Requena-Utiel Bochet et al (2010b) identificaron entre las especies del pool local externo 41 especies capaces de colonizar espontaacute-neamente y con eacutexito al menos uno de los cuatro tipos de taludes estudiados (terrapleacuten norte terra-pleacuten sur desmonte norte desmonte sur Tabla 3) En la fase de validacioacuten se demostroacute mediante una hidrosiembra en unos terraplenes de la N-330 (Utiel Valencia) un mayor establecimiento de la vegetacioacuten con la mezcla de semillas de especies seleccionadas a partir de esa lista de 41 especies (lsquocolonizadoras con eacutexitorsquo) en comparacioacuten con una mezcla de semillas de especies comerciales utilizada habitualmente en esta regioacuten para la revegetacioacuten de taludes (NTJ 08H 1996) Las densidades de cobertura vegetal fueron de 4 a 15 veces mayores durante al menos los cuatro primeros antildeos para la mezcla de especies locales se-leccionadas con este meacutetodo (Figura 21)

Figura 21 Cobertura vegetal (media plusmn desviacioacuten estaacutendar) proporcionada por las especies sembradas incluidas en la mezcla de especies seleccionadas (SelMix especies colonizadoras espontaacuteneas con eacutexito) y en la mezcla estaacutendar de especies comerciales (ComMix) durante los cuatro primeros antildeos tras una hidrosiembra a pequentildea escala La hidrosiembra se realizoacute en septiembre de 2003 Modificado a partir de Bochet et al 2010b

Evidentemente este meacutetodo garantiza el eacutexito de las especies seleccionadas uacutenicamente para unas condiciones ecoloacutegicas y un tipo de haacutebitat similares a los de las zonas inventariadas No obstante dado que las especies son capaces de superar los filtros gracias a sus caracteriacutesticas funcionales (veacutease apar-tado III4) la identificacioacuten de los rasgos funciona-les asociados al eacutexito de las especies colonizadoras de taludes podriacutea ser uacutetil para la elaboracioacuten de unos criterios teacutecnicos eficaces de seleccioacuten de es-pecies en un amplio rango de condiciones ambien-tales (Cano y Montalvo 2003 Karim y Malik 2008) Por ejemplo Cano y Montalvo (2003) proponen una tipificacioacuten integrada de las plantas de las comu-nidades de desmontes de sustratos graniacuteticos de la provincia de Pontevedra incluyendo una evalua-cioacuten de las aptitudes de los tipos encontrados para el control de la erosioacuten Los resultados de la eva-luacioacuten muestran siete tipos distintos de plantas que se discriminan por sus atributos relacionados con la adecuacioacuten ambiental la proteccioacuten aeacuterea la proteccioacuten subterraacutenea la persistencia y el valor esteacutetico Mediante este sistema de clasificacioacuten se constata que el 96 de las especies colonizadoras de desmontes son poco exigentes en cuanto a nu-trientes y presentan buenas aptitudes protectoras frente a la erosioacuten (alta proteccioacuten superficial y cre-cimiento horizontal raacutepido) Sin embargo el 48 de las especies recomendadas para la restauracioacuten de estos ambientes tienen un valor protector global de bajo a muy bajo bien por no estar adaptadas a las condiciones generales de los taludes bien por no proveer suficiente proteccioacuten superficial Estos resultados y el bajo porcentaje de especies comunes (13) entre las especies colonizadoras espontaacuteneas y las recomendadas sugieren un deficiente conoci-miento de las especies adaptadas una limitada dis-ponibilidad comercial y la existencia de criterios de seleccioacuten inadecuados

4 Utilizacioacuten de las interacciones planta-planta para la restauracioacuten

La utilizacioacuten de las interacciones positivas entre plantas en restauracioacuten tiene potencial para mejorar el eacutexito de los proyectos de restauracioacuten reducien-do a su vez el gasto en mantenimiento de estos

lugares (Padilla y Pugnaire 2006) Maacutes concretamen-te las especies herbaacuteceas promovidas al principio de la restauracioacuten por su raacutepido crecimiento y su potencial para evitar la erosioacuten podriacutean facilitar el establecimiento de especies lentildeosas (Maestre et al 2001) o incluso de otras especies herbaacuteceas dando lugar a incrementos en la diversidad y cobertura de las comunidades del talud Sin embargo el uso de estas especies herbaacuteceas como plantas facilita-doras ya sea de herbaacuteceas o lentildeosas permanece pobremente estudiado en estos medios Las inte-racciones herbaacutecea-herbaacutecea en estos medios son completamente desconocidas y los escasos estu-dios sobre las interacciones herbaacutecea-lentildeosa apun-tan a que la competencia es maacutes importante que la facilitacioacuten en estos medios (Soliveres et al en revisioacuten veacutease Capiacutetulo 67)

5 Clave dicotoacutemica para la toma de decisiones

En la Figura 22 proponemos una herramienta uacutetil en forma de clave dicotoacutemica para ayudar en la toma de decisiones para la restauracioacuten de taludes de ca-rretera Esta clave se basa en una primera propuesta de Matesanz et al (2006) parcialmente completada a partir de varios trabajos presentados en este capiacute-tulo En la clave se identifican cinco criterios princi-pales para la toma de decisiones (el clima el suelo el tipo y la pendiente del talud y la proximidad de zonas de vegetacioacuten natural)

La Figura 22 pone de manifiesto que uno de los mayores retos para el futuro reside ahora en la res-tauracioacuten de los desmontes con pendientes eleva-das (gt27deg y sobre todo gt45deg) en los que la ejecu-cioacuten del extendido de tierra vegetal representa una maniobra arriesgada y peligrosa y la aplicacioacuten de hidrosiembras no tiene eacutexito El eacutexito de la restau-racioacuten de estas laderas pasa por realizar cambios en la macrotopografiacutea reduciendo la inclinacioacuten la morfologiacutea y la longitud de las pendientes o en la microtopografiacutea aumentando la rugosidad del suelo y creando zonas de menor compactacioacuten antes de poder aplicar cualquier medida complementaria de restauracioacuten que facilite el establecimiento de la ve-getacioacuten (veacutease Capiacutetulo 3)

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Condiciones climaacuteticas

Favorables1 Desfavorables1

Tipo de talud Tipo de talud

Terrapleacuten Desmonte Terrapleacuten Desmonte

Suelo Dist Pend Suelo Dist Pend Suelo Dist

rico2 pobre2 lt27ordm cerca3 lejos3 rico2 pobre2 lt27ordm cerca3 lejos3 gt27ordm gt27ordm lt27ordm

Tierra vegetal + (hidrosiembra)4

(a partir de Valladares et al 2004)

Restauracioacuten pasiva

(a partir de Matesanz et al 2006)

simultaacuteneo simultaacuteneo

Tierra vegetal + hidrosiembra con una seleccioacuten apropiada de especies

(a partir de Bochet et al 2010)

simultaacuteneo

Pend

gt27ordm

DistSueloPend

lejos3 cerca3 pobre2rico2 gt27ordmlt27ordm lejos3cerca3 pobre2 rico2

Cambios topografiacutea yo ecotecnologiacuteas

(veacuteanse Capiacutetulos 2 y 6)

Figura 22 Clave dicotoacutemica para la toma de decisiones en la restauracioacuten de taludes de carretera Los criterios a tener en cuenta aparecen en los recuadros verdes condiciones climaacuteticas tipo de talud aacutengulo de la pendiente (Pend) condiciones del suelo (Suelo) y distancia a la vegetacioacuten natural circundante (Dist) Las liacuteneas punteadas derivan de extrapolaciones indirectas

1 Umbral de condiciones climaacuteticas lsquofavorablesdesfavorablesrsquo las condiciones climaacuteticas son desfavorables a partir del momento en que existe un periodo largo en el que el crecimiento vegetativo no es posible o estaacute fuertemente limitado por la sequiacutea Este punto criacutetico se da cuando hay maacutes de tres meses seguidos de sequiacutea o cuando la precipitacioacuten media anual es inferior o igual a 350 mm (en la Peniacutensula Ibeacuterica condiciones de ombroclima semiaacuterido o aacuterido seguacuten Rivas Martiacutenez 1983)

2 Umbral de suelo lsquoricopobrersquo un suelo es considerado pobre a partir del momento en que los 10 cm de tierra del talud que quedan ex-puestos a soportar la colonizacioacuten vegetal estaacuten compuestos de tierra mineral que nunca ha estado expuesta a meteorizacioacuten previamente (material litoloacutegico puro o tierra proveniente de horizontes de suelo no superficiales) o si existe una limitacioacuten edaacutefica especial (salinidad contaminacioacuten etc)

3 Umbral de distancia del talud a la flora natural lsquocercanalejanarsquo la vegetacioacuten natural se considera cercana en un intervalo de entre 0 m y miacutenimo 150 m desde el talud Estos resultados se basan en el trabajo de Bochet et al (2007a) en el que los autores no encuentran una limi-tacioacuten importante a la colonizacioacuten por falta de propaacutegalos en un intervalo 0 a 150 m desde el talud aunque siacute encuentran una segregacioacuten de las especies de acuerdo con su mecanismo de dispersioacuten vieacutendose favorecidas aquellas especies que se dispersan a larga distancia

4 Valladares et al (2004) consiguen buenos resultados con este tratamiento combinado de tierra vegetal + hidrosiembra No obstante podriacutea ser que el uacutenico tratamiento de extendido de tierra vegetal fuese suficiente (y la hidrosiembra innecesaria) para alcanzar resultados similares

V CONCLUSIONES

En este capiacutetulo se ha puesto de manifiesto la importancia del conocimiento de los principios y teoriacuteas que rigen el desarrollo de las comunidades de ecosistemas degradados en el eacutexito de su res-tauracioacuten

A partir de distintos estudios basados en el meacutetodo cientiacutefico en primer lugar se han identificado los filtros ecoloacutegicos que controlan la colonizacioacuten y la sucesioacuten en los taludes de infraestructuras lineales y en segundo lugar se han propuesto medidas de restauracioacuten eficaces basadas en la manipulacioacuten de estos filtros para distintos escenarios climaacuteticos topograacuteficos edaacuteficos y paisajiacutesticos

Antes de tomar cualquier decisioacuten en un proyecto de restauracioacuten y siempre que sea posible con-viene llevar a cabo un estudio de las variables ambientales que condicionan la zona a restaurar (clima suelo topografiacutea flora proximidad de la vegetacioacuten naturalhellip) Esta prospeccioacuten permitiraacute orientar la eleccioacuten de las medidas maacutes adecuadas y garantizar su viabilidad y rentabilidad en teacutermi-nos de coste beneficio

No obstante no siempre es necesario intervenir ya que en ocasiones la colonizacioacuten natural es suficien-te para proporcionar una cobertura vegetal eficaz en el control de la erosioacuten y la estabilizacioacuten del suelo

Ademaacutes cualquier actuacioacuten que favorezca los pro-cesos espontaacuteneos de colonizacioacuten regeneracioacuten y sucesioacuten daraacute lugar a ecosistemas maacutes sostenibles a largo plazo

Las teacutecnicas convencionales de extendido de tierra vegetal yo hidrosiembra pueden proporcionar resul-tados satisfactorios siempre y cuando se optimice su rendimiento con un manejo apropiado de la tierra vegetal yo con una seleccioacuten adecuada de las espe-cies hidrosembradas

La revegetacioacuten de los desmontes de elevada pen-diente sigue representando un reto importante para el futuro Tambieacuten se hace necesario un mayor cono-cimiento sobre la evolucioacuten de las comunidades de taludes a medio y largo plazo

Finalmente los estudios enfocados a la restauracioacuten de taludes de carretera cobraraacuten realmente sentido cuando esteacuten al alcance de los gestores con el fin de ser aplicados en restauracioacuten de los taludes de infraestructuras lineales

VI PREGUNTAS CLAVE

iquestEsimportanteconocerlosprocesosecoloacutegicosquedeterminanelensamblajedelasespeciesencomunidadesparalarestauracioacutendelostaludesdeinfraestructuraslineales

Siacute Los procesos ecoloacutegicos que determinan el en-samblaje de las especies pueden verse limitados en los taludes por una serie de factores (abioacuteticos bioacuteticos o de disponibilidad de semillas) tambieacuten llamados lsquofiltros ecoloacutegicosrsquo La identificacioacuten de los filtros maacutes limitantes al establecimiento de las plan-tas en estos ambientes es sumamente importante como paso previo a la toma de decisiones para el eacutexito de su restauracioacuten Asimismo la restauracioacuten consiste en la manipulacioacuten conscientemente del o de los filtros maacutes limitantes con el objetivo de acelerar o dirigir el proceso de colonizacioacuten vegetal

iquestLacolonizacioacutenespontaacuteneadelostaludesdeinfraestructuraslinealesporalgunasespecies(ynoporotras)sedebealazar

No La colonizacioacuten de los taludes responde a un proceso de seleccioacuten de las especies locales (de la zona) a traveacutes de los distintos filtros ecoloacutegicos La seleccioacuten de las especies se hace en funcioacuten de sus caracteriacutesticas que reflejan su capacidad para lle-gar germinar establecerse y competir en el talud

iquestCuaacuteleselfactormaacuteslimitanteparaelestablecimientodelasplantasenlostaludesdeinfraestructuraslineales

Las malas condiciones geomorfoloacutegicas edaacuteficas y bioloacutegicas que caracterizan habitualmente a los ta-ludes al teacutermino de la obra suelen ser limitantes en las primeras etapas de la colonizacioacuten de los taludes (germinacioacuten de las semillas y supervivencia de las

plaacutentulas) sobre todo en desmontes y en climas se-cos En las etapas posteriores de la sucesioacuten el filtro bioacutetico (competencia) puede cobrar una mayor impor-tancia al menos en terraplenes y climas huacutemedos

iquestCuaacutendoactuar(restauracioacutenpasivaoactiva)

Las malas condiciones abioacuteticas de los taludes al teacutermino de la obra comprometen en gran medida el eacutexito de una colonizacioacuten raacutepida de estas laderas y por tanto tambieacuten de una restauracioacuten pasiva Solo en condiciones climatoloacutegicas topograacuteficas geoloacute-gicas y edafoloacutegicas muy favorables se podraacute optar por una restauracioacuten pasiva Estas circunstancias se dan en presencia de precipitaciones y temperaturas adecuadas y de laderas de pendiente suave sin aflo-ramientos rocosos y suelos sin carencias nutritivas o problemas fiacutesicos importantes (nutrientes com-pactacioacuten) y proacuteximas a zonas de vegetacioacuten natural (veacutease Figura 22) Sin embargo cuando al menos uno de estos factores sea menos favorable para el establecimiento de la vegetacioacuten se optaraacute por una restauracioacuten activa con una cuidadosa eleccioacuten de las teacutecnicas de restauracioacuten maacutes adecuadas en fun-cioacuten de los filtros maacutes limitantes en cada situacioacuten

iquestCoacutemoactuar

Las medidas de restauracioacuten que se toman deben de estar dirigidas a contrarrestar el efecto del o de los filtros maacutes limitantes al establecimiento de las plantas en cada circunstancia Por ejemplo una es-casa disponibilidad de semillas debida a la ausencia de vegetacioacuten natural en las proximidades de los taludes puede ser suplida bien por la aplicacioacuten de una capa de tierra vegetal en buenas condiciones que incluye el banco de semillas de las especies locales bien por la hidrosiembra de semillas de

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especies elegidas por su capacidad de adaptacioacuten a las condiciones del medio La aplicacioacuten de tierra vegetal tambieacuten permite contrarrestar las limitacio-nes derivadas de unas malas condiciones edaacuteficas del suelo

iquestCoacutemooptimizarelcontenidodesemillasenlatierravegetal

En el trazado de la obra extraer la capa superficial con una profundidad maacutexima de 10 cm ya que por debajo de esta profundidad el nuacutemero de semillas viables es miacutenimo Esto supone el uso de una ma-quinaria apropiada para garantizar una extraccioacuten

superficial del suelo En la medida de lo posible co-ger la tierra vegetal al final del otontildeo cuando el con-tenido en semillas viables es maacuteximo Tratar de no almacenar la tierra vegetal incorporaacutendola a taludes recieacuten construidos en zonas proacuteximas a la extraccioacuten para maximizar la presencia de ecotipos adaptados a las condiciones climaacuteticas y edaacuteficas locales En caso de que la tierra vegetal sea almacenada hacerlo en montones pequentildeos y poco compactados y si las semillas han germinado esperar a que las plantas produzcan nuevas semillas que se incorporen al sue-lo Extender la tierra vegetal en capas finas (menos de 5 cm) ya que semillas de herbaacuteceas enterradas a maacutes profundidad no seraacuten capaces de emerger

Usodeunasmismasteacutecnicasderestauracioacutenparacualquierescenariogeograacuteficoclimaacuteticooedaacutefico

El uso habitual de rsquorecetasrsquo generales para la res-tauracioacuten de los taludes de infraestructuras lineales se ha traducido en la utilizacioacuten de unas mismas teacutecnicas de restauracioacuten para cualquier escenario geograacutefico climaacutetico o edaacutefico Esto conduce a la aplicacioacuten de teacutecnicas muy caras (pe hidrosiem-bras o esparcido de tierra vegetal) de las que se

podriacutea prescindir en muchas ocasiones bien por-que las condiciones climaacuteticas y edaacuteficas permiten una colonizacioacuten espontaacutenea raacutepida a partir de la vegetacioacuten natural circundante bien porque estaacuten condenadas al fracaso en condiciones extremas como es el caso en los desmontes de elevada pen-diente Por tanto para rentabilizar al maacuteximo la in-versioacuten econoacutemica de los proyectos se debe selec-cionar concienzudamente la o las teacutecnicas de res-tauracioacuten maacutes apropiadas para cada circunstancia

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VII ERRORES HABITUALES

Usodeespecieslsquoautoacutectonasrsquoenlashidrosiembrasindependientementedesucapacidaddeadaptacioacutenalascondicionesdelostaludes

Desde hace unos antildeos se recomienda incluir una proporcioacuten determinada de semillas de especies lsquoautoacutectonasrsquo en las mezclas usadas en las hidro-siembras de taludes de carretera Aunque son especies vinculadas a la zona puesto que per-tenecen al pool externo de especies locales no suelen ser especies adaptadas a las condiciones abioacuteticas de los taludes al menos en las prime-ras fases de la sucesioacuten Suelen ser especies maacutes propias de situaciones estables que aparecen en estadios maacutes avanzados de la sucesioacuten vegetal En este sentido el teacutermino de lsquoespecies autoacutec-tonasrsquo usado extensamente en el contexto de la restauracioacuten de taludes de carretera deberiacutea hacer referencia a aquellas especies autoacutectonas pero asociadas a entornos y condiciones ecoloacutegicas si-milares al de los taludes y no a las formaciones forestales o de maacuteximo nivel de desarrollo carac-teriacutesticas de la regioacuten (veacutease seccioacuten IV3)

Usodeunasmismasmezclasdesemillasenlashidrosiembrasdetaludesdedistintotipoyorientacioacuten

Dado que la intensidad de los factores que limitan el establecimiento de las plantas en los taludes variacutea en funcioacuten del tipo y orientacioacuten de los talu-des (erosioacuten competencia compactacioacuten dispo-nibilidad de aguahellip) y que los filtros seleccionan a las especies en funcioacuten de sus rasgos las mezclas de semillas para las hidrosiembras deberiacutean de

disentildearse tomando en consideracioacuten estas dife-rencias No obstante esta propuesta encarece los costes de la restauracioacuten al mismo tiempo que ralentiza su ejecucioacuten Una solucioacuten alternativa consistiriacutea en elaborar mezclas de semillas que in-cluyan especies capaces de establecerse con eacutexito en todos los tipos y orientaciones de taludes de una misma zona (veacutease el ejemplo de especies en la Tabla 3 para la zona de la Autoviacutea Andash3 a la altura de la Plana de Utiel-Requena en la Comu-nidad Valenciana)

Exclusioacutendelavegetacioacutennaturalcircundanteenelproyectopreviodeconstruccioacutenyenlafasederestauracioacuten

En la mayoriacutea de las ocasiones la existencia de vegetacioacuten natural en los aledantildeos de la obra suele obviarse desde las fases iniciales de construccioacuten de la infraestructura ya que estas zonas no se con-sideran parte de la obra Si a esto le sumamos las dificultades econoacutemicas que conlleva la inclusioacuten de maacutes terreno en el proyecto la realidad es que pocas veces se aprovecha la presencia de manchas de vegetacioacuten natural como agente de restauracioacuten pasivo e incluso se desbrozan para disminuir la probabilidad de incendios ocasionados por el traacute-fico En este capiacutetulo se ha destacado los bene-ficios de determinados tipos de haacutebitat y de su proximidad al talud como fuente de semillas para la colonizacioacuten de los taludes La evaluacioacuten previa de estos indicadores (tipo de haacutebitat y distancia al talud) permitiraacute determinar si interesa incluir las zonas de vegetacioacuten natural cercanas en el proyec-to de restauracioacuten del talud

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Introduccioacuten de especies lentildeosas

Pedro Villar-Salvador Santiago Soliveres y Joseacute Luis Quero

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IacuteNDICE

CAPIacuteTULO 6 Introduccioacuten de especies lentildeosas

Pedro Villar-Salvador Santiago Soliveres y Joseacute Luis Quero

I OBJETIVOS DE LA REVEGETACIOacuteN CON PLANTAS LENtildeOSAS FACTORES LIMITANTES

Las infraestructuras lineales (autopistas carrete-ras caminos viacuteas del tren etc) generan numero-sos impactos ambientales durante su construccioacuten y explotacioacuten (Forman y Alexander 1998 Steinfeld et al 2007) (veacutease Capiacutetulo 1) Por ello uno de los objetivos de las obras de las infraestructuras linea-les debe ser su integracioacuten ambiental y funcional en el territorio que atraviesan La vegetacioacuten tanto la surgida espontaacuteneamente como la introducida acti-vamente desempentildea un papel muy importante en dicho objetivo No obstante la revegetacioacuten activa tambieacuten es importante para conseguir otros objeti-vos relacionados tanto con el mantenimiento de la integridad de la infraestructura como con la seguri-dad y comodidad de sus usuarios Especiacuteficamente los principales objetivos que se persiguen con la revegetacioacuten son (Forman et al 2003)

a Integrar la infraestructura en la dinaacutemica ecoloacutegi-ca del territorio circundante mediante la restaura-cioacuten o rehabilitacioacuten de funciones ecosisteacutemicas como la creacioacuten mejora y proteccioacuten del suelo reduccioacuten de la escorrentiacutea superficial mitigacioacuten de la fragmentacioacuten de las poblaciones de orga-nismos y catalizacioacuten de la sucesioacuten secundaria asiacute como la mejora de la calidad del agua emitida por la infraestructura

b Mantener la integridad de la infraestructura y pro-porcionar una barrera de colisioacuten eficaz y segura en caso de accidentes

c Minimizar el deslumbramiento de los conducto-res apantallar el ruido y los gases contaminantes y reducir el viento lateral

d Eliminar los impactos visuales de las obras y me-jorar la percepcioacuten esteacutetica de la infraestructura

La implantacioacuten de una comunidad de plantas herbaacute-ceas es muy eficaz para algunas de estas funciones como prevenir la erosioacuten (Andreacutes y Jorba 2000) pero no para otras Por ello las plantas lentildeosas deben ser un complemento a las hierbas en los proyectos de revegetacioacuten de infraestructuras lineales Sin em-bargo en ambientes muy secos o cuando los suelos son muy pobres en nutrientes el establecimiento de una cubierta de hierbas es difiacutecil y lento Ello es debido a que las hierbas en general y particularmen-te las que se utilizan en la restauracioacuten de infraes-tructuras lineales demandan una gran cantidad de recursos y son poco tolerantes a factores de estreacutes Ademaacutes en ambientes mediterraacuteneos la hierba se marchita al final de la primavera incrementaacutendose el riesgo de incendio por lo que se hace necesario segarla con el consiguiente incremento del coste de mantenimiento de la obra En estos casos las plantas lentildeosas no tendriacutean por queacute ser solamente un complemento a las plantas herbaacuteceas sino una alternativa La introduccioacuten de plantas lentildeosas per-mite no solamente acelerar la sucesioacuten secundaria garantizando a medio y largo plazo todas las funcio-nes de proteccioacuten frente a la erosioacuten estabilizacioacuten del suelo y drenaje de agua La ventaja de las espe-cies lentildeosas frente a las herbaacuteceas es que producen un sistema radicular mucho maacutes profundo extenso y resistente favoreciendo una mayor consolidacioacuten y estabilidad del suelo si la densidad de planta es

suficientemente elevada Ademaacutes a largo plazo re-duciraacuten el riesgo de incendio porque la mayoriacutea de ellas permanecen verdes durante el verano y permi-ten crear manchas discontinuas de vegetacioacuten embe-bidas en una matriz de suelo desnudo lo que redu-ce la propagacioacuten del fuego en caso de incendio No conviene implantar formaciones mono especiacuteficas ya que ecoloacutegicamente pueden ser menos funciona-les resistentes y resilientes frente a perturbaciones y factores de estreacutes Tampoco es recomendable la eliminacioacuten total de la vegetacioacuten herbaacutecea antes o durante la introduccioacuten de plantas lentildeosas porque seraacute fundamental para prevenir la erosioacuten hasta que se consiga una cobertura adecuada de especies le-ntildeosas que pueda cumplir con dicha funcioacuten A la lar-ga las especies lentildeosas seraacuten las que excluyan a las hierbas A pesar de su importancia y la experiencia proveniente de la restauracioacuten forestal las plantas lentildeosas no reciben la atencioacuten debida en los pro-yectos de restauracioacuten de infraestructuras lineales ni se dedican los recursos suficientes para su man-tenimiento El resultado son taludes con herbazales sempiternos con coberturas de lentildeosas muy pobres en los que se gastan importantes recursos en siegas y herbicidas para prevenir incendios

El objetivo de este capiacutetulo es abordar los princi-pales factores limitantes y las praacutecticas que condi-cionan el establecimiento de las plantas lentildeosas en las obras de infraestructuras viarias Pretendemos hacer eacutenfasis en aquellos aspectos que a nuestro juicio son muy determinantes en la implantacioacuten de las plantas identificar los principales errores y dar una base cientiacutefica a la toma de las decisiones im-portantes

Las principales limitaciones para la implantacioacuten de plantas lentildeosas en infraestructuras lineales y los fac-tores que las determinan se recogen en la Tabla 1 (Steinfeld et al 2007)

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II SELECCIOacuteN DE ESPECIES E IMPORTANCIA DE LA PROCEDENCIA DE LOS MATERIALES DE REPRODUCCIOacuteN

La seleccioacuten de especies lentildeosas destinadas a obras civiles tradicionalmente se ha basado tanto en el potencial colonizador y la resistencia a condiciones

adversas de las especies como en criterios ornamen-tales en detrimento de otros aspectos maacutes impor-tantes desde el punto de vista ecoloacutegico

Tabla 1 Principales factores limitantes para el establecimiento de plantas lentildeosas en obras de infraestructuras lineales

FACTOR LIMITANTE iquestQUEacute CAUSA LA LIMITACIOacuteN

Disponibilidad de agua en el suelo

El reacutegimen de precipitaciones y temperaturas de la zona la orientacioacuten de la ladera y la posicioacuten en ella el viento la profundidad textura y compactacioacuten del suelo la vegetacioacuten preexistente

Disponibilidad de suelo y su estabilidad superficial

La intensidad de la precipitacioacuten la pendiente y longitud de la ladera las heladas la vegetacioacuten preexistente la pedregosidad superficial la falta de tierra vegetal

Fertilidad del suelo y baja actividad de los organismos del suelo

El contenido de materia orgaacutenica textura pH y salinidad del suelo la vegetacioacuten preexistente el tipo de roca madre la posicioacuten en la ladera y la abundancia de organismos edaacuteficos

Bajas temperaturas La altitud latitud y la orientacioacuten de la ladera

Depredacioacuten Altas densidades de herbiacutevoros

Ausencia de propaacutegulos de plantas

Fuentes de propaacutegulos alejados de la infraestructura lineal (Tormo et al 2009) y la llegada de organismos dispersores a la infraestructura lineal No obstante en ciertas infraestructuras lineales fomentar la llegada de ciertos dispersores como las aves puede poner en peligro la seguridad vial y la de las aves

Competencia con plantas especialmente de hierbas

La disponibilidad de agua y nutrientes minerales en el suelo

Los principales criterios que se deben tener en cuen-ta para la seleccioacuten de especies lentildeosas para infraes-tructuras lineales son

a Las especies deben estar adaptadas a las con-diciones ambientales del sitio de revegetacioacuten Ello significa que deben sobrevivir crecer y ser capaces de regenerar sus poblaciones sin ayuda o con una intervencioacuten miacutenima una vez estable-cidas Para ello se deben seleccionar especies na-tivas y dentro de estas emplear semillas o plan-tones de procedencias cercanas o en su defecto

compatibles con la zona a revegetar Este criterio es importante para reducir tanto los costes de es-tablecimiento y mantenimiento de la vegetacioacuten como el riesgo de expansioacuten de especies invaso-ras (Steinfeld et al 2007)

b Entre el abanico de especies posibles elegir aquellas cuyas caracteriacutesticas (pe porte den-sidad de follaje velocidad de crecimiento ca-pacidad de rebrotar produccioacuten de frutos etc) satisfagan mejor los objetivos del proyecto Por ejemplo si se necesita crear una barrera viva en

una mediana de una carretera que evite el des-lumbramiento de los conductores y detenga un vehiacuteculo que se salga de la calzada sin dantildear a sus ocupantes no se podraacuten utilizar ni aacuterboles ni especies de muy bajo porte como un tomillo (Thymus sp) o un espliego (Lavandula latifolia)

c Verificar que las semillas y plantas de las proce-dencias deseadas estaacuten disponibles en el merca-do No todas las especies estaacuten accesibles a cos-tos econoacutemicos razonables debido a la dificultad de su produccioacuten en vivero a gran escala (Vallejo et al 2003)

En relacioacuten con el primer criterio de seleccioacuten los atributos funcionales de las plantas son un aspecto fundamental para seleccionar las especies Englo-ban las caracteriacutesticas morfoloacutegicas y fisioloacutegicas que condicionan el uso del agua y el metabolismo energeacutetico y por tanto la supervivencia y creci-miento de las plantas Por ejemplo las diferencias en la arquitectura hidraacuteulica (Martiacutenez-Vilalta et al 2002) la arquitectura de la copa (Esteso-Martiacutenez et al 2006) la profundidad de las raiacuteces (Padilla y Pugnaire 2007) o las caracteriacutesticas foliares (Poor-ter y Bongers 2006) pueden determinar las diferen-cias de crecimiento y supervivencia de las especies en una contexto ambiental determinado Dentro de las caracteriacutesticas foliares el aacuterea especiacutefica foliar (SLA) que es el cociente entre el aacuterea y el peso seco de la hoja tiene una gran trascendencia fun-cional ya que se relaciona positivamente con la velocidad de crecimiento la tasa de fotosiacutentesis y transpiracioacuten de las plantas y negativamente con la resistencia a la herbivoriacutea (Ruiz Robleto y Villar 2005 Villar et al 2008 Poorter et al 2009) Va-lores bajos de SLA indican hojas maacutes densas yo gruesas Este tipo de hoja tambieacuten suele tener una mayor capacidad de retener agua y una menor ca-pacidad de transpiracioacuten lo que confiere ventajas adaptativas en climas con escasez de agua como los mediterraacuteneos (Cornelissen et al 1996 Antuacutenez et al 2001 Poorter et al 2009) Prueba de ello es que en una plantacioacuten de especies lentildeosas medite-rraacuteneas en los taludes de una carretera del Parque Natural Sierra de Cardentildea y Montoro (Coacuterdoba) se observoacute una relacioacuten negativa entre el aacuterea espe-ciacutefica foliar y la supervivencia (Figura 1) Especies con hojas de bajo SLA como Quercus ilex (enci-na) Pistacia lentiscus (lentisco) u Olea europaea var sylvestris (acebuche) estaacuten mejor adaptadas a soportar la elevada insolacioacuten y temperatura de los taludes durante el verano en contraposicioacuten con Viburnum tinus (durillo) o Quercus faginea (queji-go) que son especies predominantes en umbriacuteas y

por tanto tienen hojas maacutes finas que les permiten captar mayor radiacioacuten pero no para retener agua

En relacioacuten con la arquitectura hidraacuteulica del tallo el agua sube desde las raiacuteces hasta las hojas a traveacutes de los conductos del xilema La ascensioacuten del agua es un transporte pasivo que se realiza aprovechan-do la fuerza de cohesioacuten de las moleacuteculas de agua y es fundamental que la columna de agua que va por el interior de los conductos no se rompa De lo contrario se formariacutea una embolia (esto es aire en el conducto) que impediriacutea el flujo de agua hasta las hojas La embolia de los conductos del xilema es una de la principales causas de muerte en las espe-cies lentildeosas (McDowell et al 2008) En situaciones de sequiacutea estival la falta de agua en el suelo y la mayor transpiracioacuten foliar provocan tensiones en las columnas de agua de los conductos del xilema que pueden llegar a romperlas La mejor manera de me-dir la resistencia del xilema al embolismo es median-te las curvas de vulnerabilidad (Sperry y Saliendra 1994) en las que se determina el potencial hiacutedrico al que el tallo pierde el 50 de su conductividad hidraacuteulica (P

50) Valores muy negativos de P

50 indi-

caraacuten elevada resistencia al embolismo (Martiacutenez-Vilalta et al 2002) En la repoblacioacuten de los taludes del Parque Natural Sierra de Cardentildea y Montoro que se mencionoacute anteriormente se observoacute una relacioacuten positiva entre supervivencia y P

50 de forma que las

especies maacutes resistentes al embolismo presentaron mayor supervivencia que las especies menos resis-tentes (Figura 1)

En este estudio cabe destacar el caso particular de Retama sphaerocarpa (retama) que es una especie con relativamente poca resistencia al embolismo (P

50= -3 MPa) pero con una gran supervivencia Esto

indica que aunque la arquitectura hidraacuteulica es muy importante para el funcionamiento de las plantas no puede predecir perfectamente el potencial de su-pervivencia de una especie dado que en un mismo sistema la adaptacioacuten de las plantas puede basarse en otras estrategias en las que otros atributos fun-cionales tambieacuten pueden ser importantes (Miranda et al 2010) De ahiacute que recomendemos que la seleccioacuten de especies base en una combinacioacuten de varias ca-racteriacutesticas funcionales En el caso de la retama su alta supervivencia estaacute relacionada con la formacioacuten de profundas raiacuteces (Padilla y Pugnaire 2007) y con la falta de hojas que permite reducir la transpiracioacuten concentrando la fotosiacutentesis en los tallos los cuales ademaacutes tienen valores bajos de SLA (Figura 1)

En conclusioacuten los rasgos funcionales pueden indicar la supervivencia potencial de las especies y por ende

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es un buen criterio para su seleccioacuten en trabajos de restauracioacuten Por ejemplo el durillo con un alto SLA hojas grandes y baja resistencia al embolismo difiacute-cilmente soportaraacute las condiciones de sequiacutea y fuer-te radiacioacuten durante el verano Para la seleccioacuten de especies no es necesario cuantificar SLA o P

50 En la

literatura cientiacutefica existe cada vez maacutes informacioacuten sobre rasgos funcionales asociados a la supervivencia como los presentados aquiacute Consultando los valores por especie de estos rasgos en la literatura cientiacutefica es posible establecer el potencial de supervivencia de las especies en condiciones adversas

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0 2 4 6 8 10 12 14SLA (m2 kg-1)

Retama sphaerocarpa Quercus ilex

Quercus coccifera

Quercus faginea

Olea europea

Pistacia lentiscus

Rhamnus lycinoides

Viburnum tinus

r = -669 P lsaquo 005

Crataegus monoyna

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0

Supe

rviv

enci

a (

)

0 2 4 6 8 10

P50 (-MPa)

Retamasphaerocarpa

Quercus ilex

Quercus faginea

Olea europea

Pistacia lentiscus

Viburnum tinus

r = 070 P lsaquo 01

Quercus coccifera

Figura 1 Relacioacuten entre la supervivencia y el aacuterea especiacutefica foliar (SLA) (panel superior) y el potencial hiacutedrico en el que los tallos pierden el 50 de su conductividad hidraacuteulica (P

50) (panel inferior) entre diferentes especies lentildeosas mediterraacuteneas Los nombres comunes de las

especies son retama (Retama sphaerocarpa) encina (Quercus ilex) quejigo (Q faginea) coscoja (Q coccifera) acebuche (Olea europaea var sylvestris) lentisco (Pistacia lentiscus) taraje (Tamarix sp) y durillo (Viburnum tinus) El punto blanco correspondiente a retama no se incluyoacute en el anaacutelisis de correlacioacuten (veacutease texto para maacutes detalles)

Una vez seleccionadas las especies de plantas es importante que para cada una se elija correctamente el origen o procedencia de los materiales de repro-duccioacuten (MR) Los MR son las plantas o sus partes y las semillas que se usaraacuten en el proyecto de re-vegetacioacuten Muchas especies presentan variaciones funcionales entre poblaciones dando lugar a ecoti-pos que tienen diferentes capacidades de respues-ta a los factores abioacuteticos y bioacuteticos (Abrams 1994 Tognetti et al 1997) Por ejemplo los individuos de las poblaciones maacutes huacutemedas de Quercus suber (al-cornoque) presentan mayor mortandad al ser plan-tados en zonas secas que los individuos proceden-tes de poblaciones que experimentan mayor sequiacutea en su lugar de origen (Ramiacuterez-Valiente et al 2009) Igualmente el dantildeo ocasionado por Matsucoccus josephii una cochinilla endeacutemica del Mediterraacuteneo oriental es mayor en las procedencias de Pinus ha-lepensis (pino carrasco) del Mediterraacuteneo occidental que en las orientales (Mendel 1984) Aunque las es-pecies hayan sido bien seleccionadas un proyecto de revegetacioacuten puede resultar un fracaso si se uti-lizan procedencias no adaptadas a las condiciones ambientales locales Como recomendacioacuten geneacuterica lo ideal es usar MR de localidades proacuteximas a la obra pero a menudo no hay disponibilidad de dicho MR En estos casos se puede emplear MR de locali-dades cuyas condiciones ambientales sean similares con la zona de revegetacioacuten

La mayor parte de los paiacuteses con sectores foresta-les importantes han desarrollado una legislacioacuten y

mecanismos administrativos para regular y contro-lar el uso de los materiales de reproduccioacuten entre regiones Asiacute los paiacuteses de la Unioacuten Europea han definido regiones de procedencia para multitud de especies arboacutereas y arbustivas (Aliacutea et al 2005) Dicha normativa solo es aplicable a trabajos silviacute-colas por lo que si se realiza una interpretacioacuten restrictiva las obras de infraestructuras lineales no estariacutean sometidas a dicha legislacioacuten Sin embar-go muchas obras atraviesan zonas de vegetacioacuten natural por lo que el uso de MR de procedencias incompatibles con la zona de actuacioacuten no es acep-table porque podriacutea contaminar geneacuteticamente las poblaciones naturales y propiciar la peacuterdida de adaptaciones locales Si se desea integrar la infra-estructura en la dinaacutemica ecoloacutegica del territorio y garantizar el eacutexito del proyecto de revegetacioacuten a largo plazo es esencial emplear procedencias com-patibles con la zona donde se ha llevado a cabo la obra Por ello seriacutea deseable que se exija en los pliegos de condiciones de la obra el control del origen y la calidad de los MR Por ejemplo algunos aspectos baacutesicos que hay que considerar es evitar el uso de procedencias litorales en obras en zonas de clima continental y en las especies indiferen-tes a la naturaleza quiacutemica del suelo evitar usar procedencias de suelos baacutesicos en zonas siliacuteceas y viceversa Los criterios esenciales de uso de los materiales de reproduccioacuten y las regiones de proce-dencia reconocida por la legislacioacuten espantildeola para materiales forestales de reproduccioacuten se pueden consultar en Aliacutea et al (2005)

III MEacuteTODOS Y EacutePOCAS DE REVEGETACIOacuteN

1 Meacutetodos de revegetacioacuten

La revegetacioacuten con plantas lentildeosas puede reali-zarse mediante la plantacioacuten de plantas cultivadas en vivero introduccioacuten de fragmentos de plantas (raiacuteces rizomas y tallos) o mediante la siembra de semillas La introduccioacuten de fragmentos vegetativos de plantas lentildeosas es menos habitual que los otros meacutetodos Se emplea para ciertas especies cuando no es posible producir plantas en vivero yo la dis-ponibilidad y capacidad de germinacioacuten de las se-millas es muy reducida restringieacutendose su uso a ciertos trabajos de ecoingenieriacutea como la creacioacuten de fajinas lechos de ramajes y empalizadas vivas (Schiechtl 1986 Steinfeld et al 2007 veacutease el Capiacute-tulo 6 de este libro) Un requisito esencial para em-plear material vegetativo es que enraiacutece faacutecilmente

y que la humedad en el suelo sea elevada durante periacuteodos de tiempo prolongados Asiacute las estaqui-llas de algunas especies arboacutereas y arbustivas de los bosques de ribera como Populus nigra (chopo) P alba (aacutelamo) Tamarix spp (tarajes) y algunas es-pecies de Salix spp (sauces) enraiacutezan faacutecilmente en el campo Sin embargo requieren suelos muy huacutemedos durante todo el antildeo por lo que su em-pleo en proyectos de revegetacioacuten se restringe a obras que se ejecuten en situaciones con elevada disponibilidad de agua como aquellas en zonas de clima atlaacutentico o en obras proacuteximas a las riberas de los riacuteos (Domiacutenguez et al 2004) Tambieacuten pueden implantarse por estaquillas Olea europaea (olivo) y algunos pequentildeos arbustos de la familia de las Labiatae como Lavandula spp (lavandas o esplie-gos) Rosmarinus officinalis (romero) y Thymus spp

Tamarix sp

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En esta laacutemina se muestran las 10 especies citadas en las dos graacuteficas de la figura 1 en la parte su-perior izquierda majuelo (Crataegus monogyna) y taraje de flor pequentildea (Tamarix parviflora) en la parte superior derecha coscoja (Quercus coccifera) encina (Quercus ilex) y quejigo (Quercus faginea) En la imagen inferior y de izquierda a derecha ace-buche (Olea europaea var sylvestris) lentisco (Pis-tacea lentiscus) espino negro (Rhamnus lycioides) retama (Retama sphaerocarpa) y durillo (Viburnum tinus) Autor Ignacio Mola

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(tomillos) El empleo de material vegetativo directa-mente en el campo suele presentar menor supervi-vencia que el uso de plantas previamente cultivadas en viveros especialmente cuanto maacutes seco sea el ambiente de revegetacioacuten En comparacioacuten con las siembras directas y las plantas producidas en vivero a partir de semillas la revegetacioacuten con material vegetativo puede reducir la variabilidad geneacutetica de la poblacioacuten introducida Por ello es importante re-colectar el material vegetativo de una gran variedad de individuos madre (se aconsejan unos 50) y mez-clarla en la obra Ademaacutes en el caso de especies dioicas (con los sexos separados en distintos indivi-duos como el acebo (Ilex aquifolium) o los enebros y sabinas (Juniperus sp) es importante mantener la proporcioacuten de sexos (Steinfeld et al 2007)

Las siembras tienen sus ventajas e inconvenientes con respecto a las plantaciones (Tabla 2) Las siem-bras pueden ser puntuales en el espacio o realizar-se en toda la superficie (siembras a hecho) En las siembras a hecho las semillas se aplican a voleo tanto manualmente como con sembradoras acopla-das a vehiacuteculos diversos y se usa para especies de semillas medianas a pequentildeas Si se conocen a priori

las zonas favorables para la supervivencia (pe lsquosi-tios segurosrsquo sensu Harper et al 1961) las siem-bras puntuales suelen optimizar los esfuerzos en la restauracioacuten focalizando las siembras soacutelo en esas zonas Las siembras puntuales suelen realizarse con especies de semillas grandes como es el caso de las querciacuteneas siendo fundamental proteger la semilla de los depredadores (veacutease apartado VII) Indepen-dientemente del meacutetodo de siembra la emergencia de las plaacutentulas aumentaraacute enormemente si las semi-llas se cubren con tierra o alguacuten tipo de mulch Sin embargo es importante que las semillas no queden muy enterradas aconsejaacutendose que la profundidad a la que quede la semilla no exceda 15-2 veces su longitud (Pentildeuelas et al 2002 Steinfeld et al 2007)

La plantacioacuten de plantas cultivadas previamente en vivero tiene la ventaja de que son menos sensibles a factores de estreacutes abioacuteticos y a la depredacioacuten que las siembras En la plantacioacuten los plantones deben introducirse verticales la tierra debe quedar bien compactada alrededor del cepelloacuten sin que existan bolsas de aire que puedan desecar las raiacuteces asiacute como el nivel de la tierra debe quedar justo por debajo de las primeras hojas

Tabla 2 Ventajas y desventajas de las siembras con respecto de la plantacioacuten

VENTAJAS

Son maacutes baratas si se dispone de abundantes semillas de faacutecil germinacioacuten No obstante las siembras pueden encarecerse notablemente cuando se protegen de los depredadores con protectores individuales (veacutease apartado VII)

Son faacuteciles de ejecutar al no precisarse mano de obra cualificada

Las plantas obtenidas no presentan deformaciones radicales y ello puede favorecer el desarrollo lateral y en profundidad de las raiacuteces asiacute como su conductividad hidraacuteulica (Pemaacuten et al 2006)

DESVENTAJAS

Las semillas y plaacutentulas recieacuten emergidas presentan elevada depredacioacuten y mortandad respectivamente (Matiacuteas et al 2009 Goacutemez-Aparicio et al 2004) por lo que los resultados finales y el eacutexito de la revegetacioacuten son menos predecibles que con la plantacioacuten de plantas de varios meses de edad

No se puede utilizar para especies con baja capacidad germinativa o cuya germinacioacuten no sea coetaacutenea o que se retrasa mucho en el tiempo Esto restringe el uso de la siembra a aquellas plantas lentildeosas que producen gran cantidad de semillas baratas y faacuteciles de germinar

No es aconsejable utilizar la siembra de plantas lentildeosas en zonas con elevado estreacutes ambiental y gran cantidad de depredadores de semillas

Si la siembra es un eacutexito y el porcentaje de planta emergida es elevado se precisan aplicar aclareos para llegar a una densidad adecuada Con la plantacioacuten se controla mejor la densidad final

2 Eacutepocas del antildeo para la revegetacioacuten

Tanto la plantacioacuten como la siembra solamente se deben acometer durante determinados periacuteodos del antildeo en los que se garantice el enraizamiento de las plantas o la germinacioacuten de las semillas El calendario de revegetacioacuten por tanto lo deben determinar los ritmos bioloacutegicos de las plantas y no el calendario de la obra civil Los periacuteodos adecuados para realizar las siembras o plantaciones deben decidirse teniendo en cuenta los periacuteodos de estreacutes que limitan el desarro-llo de las plaacutentulas en la zona de trabajo Como regla general nunca debe revegetarse durante los periacuteodos en los que las plantas estaraacuten limitadas por escasez de precipitacioacuten y bajas temperaturas (Figura 2) Nun-ca se debe realizar una plantacioacuten si el suelo estaacute seco En la mayoriacutea de las zonas de clima mediterraacute-neo el verano es el periacuteodo de mayor estreacutes para las plantas En zonas con bajas temperaturas invernales el invierno tambieacuten es otro periacuteodo muy limitante

La base ecofisioloacutegica de la toma de decisioacuten sobre la fecha de revegetacioacuten se fundamenta en que la capacidad de las plantas joacutevenes para sobrevivir a la aridez estival depende en buena medida del de-sarrollo de un extenso y profundo sistema radical al comienzo del verano (Padilla y Pugnaire 2007 Cuesta et al 2010a) Ello depende de la velocidad de creci-miento de las raiacuteces de cada especie pero tambieacuten del momento en que se produce la revegetacioacuten Si se realiza muy proacutexima al verano y el verano es seco las plantas no tendraacuten tiempo suficiente para expandir su

sistema radical y sufriraacuten un fuerte estreacutes hiacutedrico Por otro lado plantar cuando el suelo estaacute muy friacuteo no es uacutetil ya que las raiacuteces de la mayoriacutea de las plantas lentildeosas no crecen cuando la temperatura del suelo permanece por debajo de los 5-10 degC (Corchero de la Torre et al 2002 Aacutelvarez-Uriacutea y Koumlrner 2007) En zonas de clima mediterraacuteneo el crecimiento de las raiacuteces es elevado en la primera mitad del otontildeo y en primavera y en los sitios de clima atlaacutentico el verano tambieacuten puede ser un periacuteodo de raacutepido crecimien-to siempre que el suelo se mantenga huacutemedo (Lyr y Hoffmann 1967 Corchero de la Torre et al 2002)

En la mayoriacutea de las zonas mediterraacuteneas el periacuteodo huacutemedo del antildeo comprende desde mediados de octu-bre a finales de abril En zonas de clima mediterraacuteneo e inviernos suaves se aconseja que la revegetacioacuten se haga pronto durante el periacuteodo huacutemedo del antildeo En los lugares en los que el invierno es muy friacuteo la revegetacioacuten debe retrasarse hasta el final del invier-no o a comienzos de la primavera (Figura 2) por-que las heladas pueden matar las plaacutentulas emergidas en otontildeo en el caso de las siembras (Pentildeuelas et al 2002) y descalzar y secar las plantas en el caso de las plantaciones En este contexto otra alternativa es adelantar la plantacioacuten y realizarse muy pronto en el otontildeo pero para ello es fundamental que las precipi-taciones otontildeales hayan comenzado En ambientes de clima atlaacutentico donde los veranos no sean muy secos las plantaciones se pueden realizar hasta el final de la primavera y comenzarse muy pronto en el otontildeo e incluso al final del verano

Figura 2 Esquema de los periacuteodos idoacuteneos de revegetacioacuten con plantas lentildeosas en zonas de clima mediterraacuteneo y atlaacutentico (columnas izquierda y derecha respectivamente) tanto de inviernos suaves como de inviernos friacuteos respectivamente (filas superior e inferior respec-tivamente) La altura de la barra simboliza la idoneidad de la fecha de revegetacioacuten Dentro de cada mes se han diferenciado la primera y segunda quincena

Clima mediterraacuteneo

Muyidoacuteneo

Nadaidoacuteneo

Muyidoacuteneo

Nadaidoacuteneo

Inviernossuaves

Inviernosfrios

Clima atlaacutentico

Muy idoacuteneo

Nada idoacuteneo

Muy idoacuteneo

Nada idoacuteneo

Clima mediterraacuteneo Clima atlaacutentico

Inviernos suaves

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Enero Feb Marzo Abril Mayo Junio Julio Agos Sept Oct Nov Dic Enero Feb Marzo Abril Mayo Junio Julio Agos Sept Oct Nov Dic

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Un aspecto muy importante para decidir la eacutepoca de plantacioacuten en climas de inviernos suaves es el haacutebito foliar de las especies (caducifolias frente a perennifolias) La plantacioacuten de caducifolias de in-vierno a partir de la segunda mitad del otontildeo y du-rante el invierno no propicia la formacioacuten de raiacuteces durante este periacuteodo ya que el crecimiento principal de sus raiacuteces no se produce hasta la formacioacuten de follaje en la brotacioacuten primaveral (Lyr y Hoffmann 1967 Sardaacute et al 2005) Por tanto para las especies caducifolias las plantaciones deben retrasarse has-ta unas semanas antes de la brotacioacuten En cambio las especies perennifolias siacute pueden producir raiacuteces durante el invierno siempre que la temperatura del

suelo se mantenga por encima de los 5-10 degC (Lyr y Hoffmann 1967 Riedacker 1976 Corchero de la Torre et al 2002) ya que en las especies perennifolias la formacioacuten de las raiacuteces depende en buena medida de la fotosiacutentesis del momento (van den Driessche 1991b Maillard et al 2004) En los casos en los que la obra combine tanto especies caducifolias y peren-nifolias se recomienda que se retrase la plantacioacuten hacia el final del periacuteodo friacuteo y se planten a la vez los dos tipos de plantas para reducir los costes de plantacioacuten Por ejemplo en muchas zonas de clima mediterraacuteneo continental este momento puede ser entre la segunda quincena de febrero y la primera quincena de marzo

IV CALIDAD MORFOLOacuteGICA Y FISIOLOacuteGICA DE LAS PLANTAS

Se considera que una planta es de calidad cuan-do es capaz de sobrevivir y crecer adecuadamente en un medio determinado y por tanto cumplir los objetivos establecidos en un plan de revegetacioacuten (Ritchie 1984 Villar-Salvador 2003 Cortina et al 2006) La supervivencia y crecimiento de las plantas utilizadas en los proyectos de revegetacioacuten estaacuten li-gados a su balance de carbono agua y nutrientes minerales Dicho balance depende en uacuteltima instan-cia de los atributos morfoloacutegicos y fisioloacutegicos de las plantas (Gaudet y Keddy 1988 Burdett 1990) A escala intraespeciacutefica las plantas pueden mostrar grandes diferencias en sus atributos funcionales de-pendiendo de la plasticidad fenotiacutepica de la especie la procedencia de la semilla y las condiciones am-bientales durante el cultivo en vivero y el transporte al lugar de plantacioacuten (Coutts 1982 Balaguer et al 2001 Vilagrosa et al 2003 Mena-Petite et al 2004 Villar-Salvador et al 2004 Villar-Salvador et al 2008 Cuesta et al 2010a) No existe un uacutenico modelo de calidad de planta ideal para cada especie Una plan-ta con determinadas caracteriacutesticas funcionales pue-de ser vaacutelida para ciertos objetivos de revegetacioacuten pero no para otros Por tanto de forma ideal las caracteriacutesticas funcionales de las plantas deberiacutean diferir en funcioacuten de las caracteriacutesticas ambientales del lugar de plantacioacuten (Rose et al 1990) La calidad de las plantas cambia en el tiempo variando con su estado fenoloacutegico y su desarrollo ontogeneacutetico

Por ejemplo la resistencia a las heladas en muchas plantas del mundo templado se incrementa a lo lar-go del otontildeo e invierno y se reduce en primavera en respuesta a las horas de luz y la temperatura ambiental (Grossnickle 1992) La calidad de la planta tambieacuten puede cambiar con su edad Nicolaacutes et al (2004) observaron que los plantones de dos savias de Quercus faginea (quejigo) mostraron menor ca-pacidad de producir nuevas raiacuteces supervivencia y crecimiento que los de una savia

La importancia de la calidad de la planta en el eacutexito de un proyecto de revegetacioacuten se incrementa con el grado de estreacutes ambiental en el lugar de la plantacioacuten (del Campo et al 2007 Cuesta et al 2010a) si bien en situaciones de fuerte estreacutes ambiental otros aspectos del proyecto de revegetacioacuten como la preparacioacuten del suelo y los cuidados posplantacioacuten pueden tener un papel maacutes relevante que la calidad de la planta (Navarro et al 2006a) Finalmente las consecuencias del empleo de planta de baja calidad suelen ser muy aparentes a corto plazo Pero a veces las consecuen-cias son solo aparentes muchos antildeos maacutes tarde tal como sucede con las deformaciones radicales causa-das por algunos tipos de contenedores que reducen la estabilidad estructural de los aacuterboles a largo plazo (Lindstroumlm y Rune 1999) En la Tabla 3 se recogen algunas recomendaciones baacutesicas para garantizar un miacutenimo de calidad en las plantas

Tabla 3 Recomendaciones baacutesicas para garantizar un miacutenimo de calidad de planta en los trabajos de revegetacioacuten con plantas lentildeosas

Utilizar preferentemente plantas cultivadas en contenedor que plantas cultivadas a raiacutez desnuda en plantaciones de zonas secas o muy friacuteas Las plantas cultivadas en contenedor casi siempre tienen mayor supervivencia que las cultivadas a raiacutez desnuda (South et al 2005) especialmente en especies perennifolias

Evitar plantas con raiacuteces severamente deformadas (Figura 3) especialmente en aacuterboles porque pueden comprometer la estabilidad estructural a largo plazo En este sentido no usar plantas cultivadas en contenedores que carezcan de sistemas antiespiralizantes como las macetas troncocoacutenicas empleadas en el cultivo de especies ornamentales Esta exigencia probablemente sea menos importante para arbustos de pequentildeo porte

Usar plantas cultivadas en contenedores de al menos 250 ml para plantaciones de zonas secas La supervivencia y crecimiento de las plantas estaacuten directamente relacionados con el volumen del contenedor (South et al 2005 Tsakaldimi et al 2005 Domiacutenguez-Lerena et al 2006) En zonas huacutemedas se pueden usar contenedores maacutes pequentildeos pero la duracioacuten del cultivo (edad de la planta) deberaacute ser menor especialmente en especies de raacutepido crecimiento

No usar plantas cuyos cepellones no esteacuten consolidados es decir que el conglomerado de sustrato retenido por las raiacuteces no se desmorone cuando las plantas se extraigan de las bandejas o durante la manipulacioacuten en la plantacioacuten

Rechazar plantas con podredumbres o plagas y en el caso particular de las especies perennifolias evitar plantas con follaje cloroacutetico y senescente Puede indicar que las plantas esteacuten enfermas o tengan graves deficiencias nutricionales En caso de enfermedades estas pueden propagarse al resto de plantas del proyecto y a las poblaciones naturales circundantes

Desechar las plantas con heridas recientes en los tallos especialmente en el cuello de la raiacutez

No emplear cultivos que tengan dos o maacutes individuos por contenedor En el campo competiraacuten entre siacute y tendraacuten menor vigor

Evitar plantas cuya parte aeacuterea esteacute en crecimiento en el momento de la plantacioacuten Tienen una escasa resistencia a factores de estreacutes ya que las plantas en crecimiento relajan sus mecanismos de resistencia a factores de estreacutes

No llevar al campo plantas que han sido cultivadas en un invernadero sin que se hayan previamente aclimatado (endurecido) al menos un mes al aire libre y a ser posible expuestas a pleno sol

Evitar plantas que muestren un excesivo desequilibrio entre el tamantildeo de su parte aeacuterea y radical En general no son recomendables tanto partes aeacutereas mucho maacutes grandes que las raiacuteces como lo contrario A modo orientativo un pino carrasco (P halepensis) o una encina (Q ilex) cuya altura sea de una a dos veces la altura del contenedor puede ser considerado normal Valores maacutes altos o inferiores no son recomendables Una revisioacuten de la importancia del tamantildeo de las plantas en su establecimiento en campo puede encontrarse en Navarro et al (2006b) En general dentro de los rangos de altura mencionados las plantas de mayor tamantildeo normalmente tienen mayor supervivencia y crecimiento en campo que las maacutes pequentildeas (Villar-Salvador et al 2004 Villar-Salvador et al 2008 Cuesta et al 2010a) (Figura 3)

Evitar plantas cuyos cepellones esteacuten secos al salir del vivero o al llegar a la obra asiacute como plantas con gran cantidad de hierbas en los alveacuteolos

Evitar el uso de plantas cultivadas en viveros emplazados en localidades de inviernos suaves para proyectos de revegetacioacuten en localidades friacuteas aunque la procedencia del material de reproduccioacuten sea adecuada (Mollaacute et al 2006) Si no queda maacutes remedio que utilizar este tipo de planta una solucioacuten es adelantar las plantaciones a mitad del otontildeo para que la planta se aclimate al friacuteo en el campo

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La calidad de una planta puede alterarse al ser llevada al lugar de plantacioacuten El trato rudo de las plantas por los operarios o su desecacioacuten causada por un prolongado e inadecuado almacenamiento y transporte asiacute como una incorrecta plantacioacuten son algunos de los factores que pueden mermar el vigor de la planta de mejor calidad y arruinar

el proyecto de revegetacioacuten maacutes esmerado (Mc-Kay 1997 Vallas-Cuesta et al 1999 Landis et al 2010) Por ejemplo los plantones de P halepensis reducen fuertemente su supervivencia y crecimien-to cuando alcanzan un potencial hiacutedrico al alba inferior a -2 MPa antes de su plantacioacuten (Vallas-Cuesta et al 1999)

A B

C

Figura 3 (A) Detalle de dos plantones de una savia de pino carrasco de tamantildeo de la parte aeacuterea y proporcioacuten de parte aeacuterea con respecto a la parte radical muy distinta La planta grande presentoacute mayor supervivencia y crecimiento plantado con alta densidad de hierba que la planta pequentildea (B) Plantones de Quercus faginea cultivados con crecientes niveles de fertilizante Los dos plantones pequentildeos de la izquierda fueron cultivados con nada o muy poco fertilizante mostrando menor supervivencia y crecimiento en campo que los otros tres plantones grandes que recibieron mayor fertilizacioacuten durante su cultivo (C) Detalle de una raiacutez revirada de Pistacia terebinthus por un mal manejo del cultivo (Fotos Pedro Villar)

La desecacioacuten de las plantas durante el transporte y almacenamiento de la planta afecta menos a las plantas en contenedor que a las de raiacutez desnuda ya que el agua almacenada en los cepellones retrasa su desecacioacuten (Mena-Petite et al 2004) Por esta razoacuten es fundamental que los cepellones de las plantas en contenedor esteacuten bien hidratados al salir del vivero y en el momento de la plantacioacuten aunque ello su-ponga un incremento de los costes de transporte Finalmente las plantas almacenadas en la obra de-beraacuten mantenerse regadas si no van a ser plantadas inmediatamente

Las plantas se deben transportar al lugar de trabajo sin que se recalienten y desequen Por ello no de-ben exponerse al viento ni al sol Las plantas a raiacutez desnuda deben transportarse envueltas en bolsas de papel o alguacuten material semipermeable o en cajas de cartoacuten Lo ideal es que se transporten refrige-radas Si las plantas a raiacutez desnuda no van a ser usadas inmediatamente al llegar a la obra deberaacuten ser aviveradas o guardadas en una caacutemara refrige-rada (Landis et al 2010) En el caso de las plantas en contenedor deberaacuten permanecer almacenadas en lugares frescos y sombreados (pero no a oscuras) hasta su uso debieacutendose programar bien los traba-jos de plantacioacuten para minimizar el periacuteodo de alma-cenamiento y evitar asiacute la desecacioacuten de la planta

Muchas plantas desarrollan interacciones mutualistas con los microorganismos del suelo Las simbiosis con hongos (micorrizas) son de las maacutes importantes y fa-cilitan a la planta la toma de nutrientes minerales y agua lo que es importante para superar las eacutepocas de sequiacutea y vivir en suelos pobres A cambio las mico-rrizas reciben carbohidratos formados por las plantas (Moora y Zobel 2010) Las poblaciones de microorga-nismos del suelo son muy reducidas en lugares muy

degradados o en las obras que han usado materiales esteacuteriles para la construccioacuten de terraplenes y don-de no existe tierra vegetal Ello unido a la pobreza de nutrientes del suelo y las condiciones de elevado estreacutes hiacutedrico dificulta auacuten maacutes la colonizacioacuten de las plantas lentildeosas especialmente las de etapas in-termedias y tardiacuteas de la sucesioacuten Por tanto puede ser recomendable la introduccioacuten de estos microor-ganismos ya sea mezclando esporas con la siembra o mediante la plantacioacuten de individuos previamente micorrizados en el vivero Esta uacuteltima opcioacuten es maacutes recomendable por ser maacutes barata a la vez que actuacutea como fuente de esporas para toda la zona (Moora y Zobel 2010) No obstante la mayoriacutea de las plantas cultivadas en viveros se micorrizan solas durante su cultivo con micorrizas tiacutepicas de vivero o incluso de hongos maacutes frecuentes en ambientes forestales si los viveros se localizan en la proximidad de masas fo-restales Las micorrizas y otras simbiosis con otros microorganismos pueden aumentar el crecimiento y la supervivencia de los individuos introducidos (Titus y del Moral 1998 Requena et al 2001 Thrall et al 2005 Domiacutenguez et al 2006) a la vez que facilitan la formacioacuten de redes de micelios que ayudan a fijar el suelo y la colonizacioacuten de las raiacuteces de otras especies (Dodd 2000) Ademaacutes confieren ventajas a especies normalmente maacutes tardiacuteas en la sucesioacuten (pe lentildeo-sas o herbaacuteceas perennes de vida larga) frente a es-pecies pioneras como las hierbas anuales Por ejem-plo Salsola kali una planta anual problemaacutetica en los taludes de las carreteras porque la mata seca pone en peligro a los conductores al rodar sobre la calzada se mostroacute maacutes competitiva que las especies herbaacuteceas perennes cuando estas no se hallaban micorrizadas Sin embargo la inoculacioacuten con micorrizas hizo que las plantas perennes fueran maacutes competitivas que S kali reduciendo notablemente su presencia en la co-munidad (Allen y Allen 1984)

V DISTRIBUCIOacuteN ESPACIAL DE LAS PLANTAS

Los factores ambientales importantes para la vida de los organismos pueden variar en el espacio a escalas muy diversas desde variaciones a escala regional hasta variaciones muy pequentildeas de apenas unos centiacutemetros (Lechowizc y Bell 1991) Estas variaciones deben ser tenidas en cuenta a la hora de distribuir en el espacio las plantas Por ejemplo la orientacioacuten de los taludes o la posicioacuten dentro del talud conlleva cambios en la disponibilidad de recursos y condicio-nes ambientales que deben ser consideradas para decidir la localizacioacuten de las diferentes especies la

densidad y la distribucioacuten de los individuos Muy frecuentemente se organizan los individuos seguacuten distribuciones regulares (pe cuadrangular rectan-gular tresbolillo lineal) Sin embargo dichas dis-tribuciones limitan la posibilidad de incorporar la variacioacuten espacial en los factores ambientales que ocurre a escalas pequentildeas (Beckage y Clark 2003) La revegetacioacuten basada en la introduccioacuten de planto-nes irregularmente espaciados o formando manchas que imiten la distribucioacuten de la vegetacioacuten natural puede favorecer el desarrollo de lsquoislas de recursosrsquo

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Talud de terrapleacuten de 30 antildeos de antiguumledad de una carretera comarcal de la provincia de Maacutelaga En la parte superior de la fotografiacutea se puede apreciar la presencia de distintas especies de lentildeosas del geacutene-ro Ulex (Foto Pablo Garciacutea-Palacios)

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mejorar el banco de semillas y facilitar el recluta-miento de nuevas plantas acelerando la dinaacutemica sucesional (Maestre 2003) Ademaacutes conocer a priori la distribucioacuten espacial de los factores ambientales puede ayudar a seleccionar los mejores lugares de plantacioacuten y maximizar la supervivencia (pe lsquore-cruitment hotspotsrsquo sensu Hampe et al 2008) Tam-bieacuten se pueden crear manchas de un alto conteni-do en recursos mediante fertilizacioacuten localizada en puntos concretos o bien mediante la construccioacuten de microcuencas u otras estructuras de retencioacuten de agua (veacutease Capiacutetulo 6) De este modo las tareas de revegetacioacuten podriacutean centrarse en estas manchas optimizando asiacute los recursos y evitando plantar o sembrar en zonas donde la probabilidad de marras se incrementa Por ejemplo en un estudio espacial a pequentildea escala de las propiedades edaacuteficas Maes-tre et al (2003) observaron que las manchas con alta proporcioacuten de suelo desnudo alto contenido de arena o alta resistencia a la penetracioacuten comprome-tiacutean la supervivencia de los plantones A modo de ejemplo las especies lentildeosas pioneras y tolerantes al estreacutes pueden ser introducidas en zonas donde se ha eliminado la hierba en micrositios maacutes xeacutericos como zonas convexas o con peores suelos laderas en solana En cambio las plantas lentildeosas interme-dias y tardiacuteas de la sucesioacuten o aquellas que tengan altos requerimientos en recursos y baja tolerancia a la sequiacutea se deberiacutean plantar en parches con elevado contenido de recursos en sitios que tengan suelos maacutes profundos poca pedregosidad exposiciones de umbriacutea o las zonas bajas de los taludes que almace-nan maacutes humedad y nutrientes Las zonas del talud con rocas en principio no necesitan recibir ningu-na actuacioacuten De este modo se pueden conseguir

sistemas maacutes heterogeacuteneos con una estructura en parches que facilitan la integracioacuten paisajiacutestica de las obras a la vez que se aumenta la diversidad bio-loacutegica Un aspecto que se debe contemplar es que el tipo de preparacioacuten del suelo va a condicionar la distribucioacuten espacial de las plantas En concreto los subsolados lineales imponen un grado de regu-laridad en la distribucioacuten de las plantas mientras que las preparaciones puntuales (veacutease apartado VI) permiten una mayor heterogeneidad

La densidad de plantas que se introduzcan inicial-mente dependeraacute de la cobertura final que se desee el tamantildeo de la especie de adulta y la mortandad esperada de las especies en el contexto ambiental de la obra Por ejemplo si se desea una cobertura del suelo medio alta (50-80) y se desea introducir un arbusto de bajo porte y una especie arboacuterea ambas con una supervivencia estimada del 50 a corto pla-zo la densidad de plantacioacuten deberaacute ser mucho maacutes alta en a primera que en la segunda 20000 frente a 700 pies ha-1 La densidad de plantacioacuten tambieacuten debe contemplar la ecologiacutea de las especies y los condicionantes ambientales del lugar de la obra Asiacute las especies que son ecoloacutegicamente semejantes o esteacuten muy emparentadas tenderaacuten a competir maacutes intensamente entre siacute que aquellas con las caracteriacutes-ticas contrarias (Valiente-Banuet y Verduacute 2008) por lo que plantaciones mixtas de especies ecoloacutegicamente semejantes deberaacuten contemplar densidades menores En lugares de mayor aridez o pobreza de nutrientes en el suelo tambieacuten deberaacuten contemplar densidades inicialmente mayores previendo una mayor mortan-dad Densidades elevadas de aacuterboles conllevaraacuten a la larga un empobrecimiento de arbustos helioacutefilos

VI PREPARACIOacuteN DEL SUELO

La compactacioacuten del sustrato es uno de los factores que maacutes dificulta el establecimiento de la vegetacioacuten lentildeosa al limitar la infiltracioacuten de agua y la penetra-cioacuten en profundidad de las raiacuteces la aireacioacuten y el volumen uacutetil de suelo para las plantas (Bejarano et al 2010) Para mitigar estos efectos es muy impor-tante realizar una preparacioacuten fiacutesica del suelo previa a la plantacioacuten La importancia de la preparacioacuten del suelo se incrementa cuanto maacutes aacuterido sea el clima o cuanto maacutes se retrase la fecha de plantacioacuten (Que-rejeta et al 2001 Saquete et al 2006 Palacios et al 2009) Las preparaciones maacutes intensas es decir las que afectan a un mayor volumen de suelo tienen un mayor efecto sobre el desarrollo de las plantas

Las preparaciones del suelo mecaacutenicas son habi-tualmente maacutes efectivas que las manuales ya que remueven mayor volumen de suelo En una siembra de Q ilex sobre margas yesiacuteferas un subsolado de 50-60 cm de profundidad incrementoacute la superviven-cia un 700 al final del verano con respecto a ho-yos manuales de 10 cm de profundidad (Nicolaacutes et al 1997 Figura 4) En una plantacioacuten de Q faginea (quejigo) en terrenos agriacutecolas abandonados no se observaron diferencias de supervivencia entre un subsolado y hoyos efectuados con retroexcavadora pero siacute de crecimiento siendo mayor en el segundo caso que produjo una mayor remocioacuten del suelo (Nicolaacutes et al 2004)

Las preparaciones del suelo que pueden aplicarse en obras de infraestructuras lineales pueden clasifi-carse en dos categoriacuteas preparaciones puntuales y preparaciones lineales Las preparaciones puntuales engloban a casillas hoyos y microcuencas bien he-chos a mano o bien con picos mecaacutenicos barrenas helicoidales o retroexcavadora o una combinacioacuten de medios mecaacutenicos y manuales (Serrada 2000) En algunas obras se utilizan inyectores de agua a alta presioacuten para abrir el hoyo Las preparaciones puntuales no implican necesariamente la apertura de hoyos ni el volteo de los horizontes del suelo

especialmente las realizadas con excavadora o pi-cos mecaacutenicos Por ejemplo para los ahoyados con retroexcavadora se debe introducir el cazo hasta la profundidad deseada y levantar el suelo sin voltear el cazo para finalmente dejarlo caer de nuevo en el mismo punto Posteriormente el operario abriraacute con un barroacuten o una azada un pequentildeo hueco don-de introducir la planta o la semilla sobre el suelo esponjado En el caso de las retroexcavadoras es preferible no usar un cazo sino solo untildeas El cazo puede ocasionar compactacioacuten en su roce con las paredes y el fondo del hoyo que las untildeas evitan

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Figura 4 Evolucioacuten de la emergencia y supervivencia de siembras de bellotas de Quercus ilex (encina) realizadas sobre dos tipos de prepara-cioacuten del suelo subsolados de 50-60 cm de profundidad y casillas hechas a mano de 10 cm de profundidad La figura estaacute dibujada a partir de los datos de Nicolaacutes et al (1997) El experimento se realizoacute sobre margas yesiacuteferas en Guadalajara La siembra se hizo en febrero y se protegioacute de los depredadores con tubos protectores de 30 cm La potencia germinativa del lote de bellotas empleado en el estudio fue del 55 determinado en condiciones de laboratorio

Las preparaciones lineales engloban a los subsola-dos lineales que consisten en realizar cortes al sue-lo normalmente siguiendo las curvas de nivel con un apero denominado subsolador o ripper montado sobre un tractor o un buldoacutezer El subsolador puede profundizar hasta unos 60-80 cm El subsolado tam-poco produce una alteracioacuten en los horizontes del suelo y tiene una gran capacidad de infiltrar la esco-rrentiacutea superficial de agua En superficies llanas el subsolado se puede hacer cruzado La mecanizacioacuten

de la preparacioacuten del suelo dependeraacute de la pen-diente de los taludes Una profusioacuten de detalles so-bre teacutecnicas de preparacioacuten del suelo puede encon-trarse en Serrada (2000) y Steinfeld et al (2007) Como recomendacioacuten general en caso de prepara-ciones puntuales el hoyo de trabajo debe tener una dimensioacuten miacutenima de 40 times 40 times 40 cm

Los meacutetodos destinados a incrementar la fertilidad del suelo se tratan en detalle en el Capiacutetulo 6 de este libro

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VII CUIDADOS POSPLANTACIOacuteN

Los cuidados posplantacioacuten son aquellas medidas encaminadas a garantizar el establecimiento de las plantas una vez realizada la plantacioacuten o la siembra Se aplican durante un breve periacuteodo de tiempo que variacutea entre 1-5 antildeos dependiendo del tratamiento pero habitualmente no pasan de los dos antildeos que es el periacuteodo de garantiacutea que tiene la empresa cons-tructora Los principales cuidados posplantacioacuten son los siguientes

1 Riegos

Los riegos son muy importantes para garantizar nive-les adecuados de supervivencia en localidades con escasa precipitacioacuten en antildeos muy secos cuando se trabaja con especies poco resistentes a la sequiacutea o se planta fuera de las eacutepocas adecuadas (Jimeacutenez et al 2007 Rey Benayas 1998) No obstante la necesi-dad de riego se reduce significativamente o incluso pueden ser innecesaria si la toma de decisiones y la ejecucioacuten de las otras actividades de revegetacioacuten se hacen correctamente como la seleccioacuten correcta de especies la preparacioacuten del suelo y sobre todo la revegetacioacuten se hace en el periacuteodo adecuado

Habitualmente se diferencian los riegos de esta-blecimiento y los de mantenimiento Los primeros se dan inmediatamente despueacutes de la plantacioacuten y su uso se suele restringir a situaciones en las que el suelo tiene poca humedad en el momento de la plantacioacuten yo las plantaciones se han hecho muy tardiacuteamente Los riegos de mantenimiento se suelen aplicar solamente en los periacuteodos de mayor aridez En ambientes mediterraacuteneos se suele recomendar la aplicacioacuten de entre 20 y 40 l por planta en cada evento de riego (Serrada 2000) que no deben ac-tivar el crecimiento aeacutereo de la planta ya que la resistencia a factores de estreacutes se reduce El riego conviene repartirlo durante el periacuteodo de sequiacutea en lugar de aplicarse en un uacutenico riego en mitad del periodo de sequiacutea Los riegos se aplican a mano por medio de mangueras conectadas a cisternas moacutevi-les (Figura 5) Ahora bien esto solo es posible si la cisterna de riego tiene acceso al lugar de trabajo y en terrenos de poca pendiente Otra alternativa es montar un sistema de riego por goteo conectado a unos depoacutesitos de agua que perioacutedicamente son rellenados Esta opcioacuten es cara y se restringe ha-bitualmente a las medianas aunque tambieacuten seriacutea deseable en taludes con pendientes pronunciadas y en las que el riego se va a mantener durante varios

antildeos Los riegos deben planificarse correctamente porque encarecen enormemente los costes de los proyectos de revegetacioacuten

2 Control de la competencia con otras plantas

En la restauracioacuten de infraestructuras lineales habitual-mente se persiguen dos objetivos ecoloacutegicos proteger al suelo de la erosioacuten y acelerar la sucesioacuten secundaria consiguiendo asiacute comunidades de plantas maacutes desa-rrolladas y estables El primer objetivo se puede con-seguir estableciendo una cubierta de hierbas densa mientras que ambos objetivos se pueden alcanzar con especies lentildeosas Sin embargo las especies lentildeosas crecen maacutes despacio que las hierbas por lo que a corto plazo el primer objetivo se puede alcanzar maacutes raacutepidamente con hierbas Ambos objetivos se ven fa-vorecidos por separado cuando se incrementa la fertili-dad del suelo y la disponibilidad hiacutedrica Sin embargo bajo estas condiciones la competencia entre plantas herbaacuteceas y lentildeosas es maacutes intensa (Loumlf 2000 Rey Benayas et al 2005) y por tanto estos dos objetivos primordiales pueden entrar en conflicto

La mayoriacutea de especies herbaacuteceas que se desarro-llan en los taludes son ruderales anuales esto es especies que completan su ciclo de vida en un antildeo y que estaacuten adaptadas a vivir en sitios muy per-turbados (Grime 2001) Ademaacutes son maacutes eficaces en explotar los recursos del suelo que las especies lentildeosas porque crecen maacutes raacutepidamente tienen raiacute-ces con una elevada longitud especiacutefica y una ma-yor capacidad intriacutenseca de absorcioacuten de nutrientes (Grime and Hunt 1975 Eissenstat 1992) La compe-tencia entre las especies herbaacuteceas y lentildeosas es maacutes intensa cuanto menor es la disponibilidad de recursos edaacuteficos de forma que la implantacioacuten de las plantas lentildeosas suele fracasar si no se eliminan las hierbas (Rey Benayas et al 2005 Goacutemez-Aparicio 2009 Cuesta et al 2010a Cuesta et al 2010b) Sin embargo para una especie dada la capacidad com-petitiva de los plantones lentildeosos depende de sus atributos funcionales los cuales se pueden deter-minar seguacuten coacutemo se cultive la planta en el vive-ro (van den Driessche 1991a Villar-Salvador et al 2004) Asiacute en P halepensis los plantones de gran tamantildeo y elevada concentracioacuten de nitroacutegeno en sus tejidos tienen mayor capacidad de competencia con las hierbas que los plantones de atributos contrarios (Figura 3 Cuesta et al 2010a)

A B

C D

Figura 5 Detalles de tubos de riego por goteo en la mediana de la Autoviacutea A-9 (Almeriacutea) (A) y en una ladera plantada de encina en Cazorla (Jaeacuten) (B) una cisterna de agua para alimentar un sistema de riego por goteo en una repoblacioacuten en Ayora (Valencia) (C) y regando a mano con manguera conectada a una cuba situada en la parte superior de la infraestructura en un talud del tren de alta velocidad a Maacutelaga (Humil-ladero) (D) (Fotos Pedro Villar y Marisa Martiacutenez)

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Un aumento de los recursos edaacuteficos sobre todo agua relaja la competencia tendieacutendose a interaccio-nes maacutes o menos neutras en situaciones intermedias de disponibilidad de recursos edaacuteficos (Figura 6) Sin embargo cuando los recursos edaacuteficos superan un cierto umbral y se hacen muy abundantes las hier-bas y las lentildeosas pueden volver a experimentar com-petencia principalmente por la luz Sin embargo el resultado de la competencia con las hierbas diferi-raacute dependiendo del tipo de planta lentildeosa Para las

especies pioneras de la sucesioacuten la mayoriacutea de las cuales son helioacutefilas se traduciraacute en un efecto nega-tivo ya que las hierbas impediraacuten el acceso a la luz Sin embargo las especies intermedias y tardiacuteas de la sucesioacuten que suelen regenerarse mejor en ambientes de luz moderada sufriraacuten menos la competencia que las pioneras de la sucesioacuten La Figura 6 sintetiza este proceso y puede constituir un modelo conceptual de toma de decisiones sobre el control de las especies herbaacuteceas cuando se introducen especies lentildeosas

Resp

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baacutece

as

Especies tardiacuteas en la sucesioacuten

Herbaacuteceas positivas para especies tardiacuteas en la sucesioacuten

Herbaacuteceas negativas se recomienda eliminarlas

Especies pioneras

+

0

1- Disponibilidad de recursos en el suelo +

Figura 6 Modelo conceptual del efecto de las plantas herbaacuteceas sobre las lentildeosas dependiendo de su estrategia ecoloacutegica (pionera frente a tardiacutea de la sucesioacuten) y el nivel de recursos disponibles en el suelo Por encima de la liacutenea punteada estos efectos son positivos y por debajo son negativos

No debe eliminarse la cubierta de hierbas en toda la superficie del talud cuando se desea implantar las lentildeosas Basta eliminar la hierba en un halo de 05-1 m de diaacutemetro alrededor de cada plantoacuten para relajar la competencia (Figura 7) De esta manera a la vez que reducimos la competencia sobre las espe-cies lentildeosas de intereacutes se garantiza una cobertura del suelo suficiente para evitar la erosioacuten y fomentar otras funciones ecoloacutegicas como el incremento de materia orgaacutenica en el suelo y la creacioacuten de haacutebitat para otros organismos

El control de la competencia herbaacutecea se puede realizar por procedimientos fiacutesicos yo quiacutemicos Los meacutetodos fiacutesicos implican la remocioacuten de la hier-ba por medio de desbroces y escardas o el impedi-mento de su crecimiento por medio de una barrera

fiacutesica o mulch Estos uacuteltimos consisten en piedras o telas y mantas permeables de fibras vegetales o sinteacuteticas que se colocan pegadas al suelo alrede-dor del plantoacuten y que dificultan la emergencia de las plaacutentulas de herbaacuteceas (Pentildeuelas et al 1996) y reducen la evaporacioacuten de agua del suelo de forma anaacuteloga a como lo hace la hojarasca de muchas plantas (Rebollo et al 2001) Las escardas o des-broces deben planificarse cuando la hierba tiene un tamantildeo suficiente para competir con la lentildeo-sa Realizarlas demasiado pronto no es efectivo y probablemente habraacute que repetirlas maacutes adelante mientras que tampoco se deben retrasar mucho porque la hierba ya estaraacute compitiendo intensa-mente con la planta lentildeosa Los meacutetodos quiacutemicos de control de la competencia herbaacutecea se realizan con herbicidas siendo recomendable aplicar una

mezcla de herbicidas de contacto y residuales es-peciacuteficos para gramiacuteneas compuestas o legumino-sas las familias predominantes en los herbazales de los taludes Es esencial que la planta lentildeosa sea protegida por un tubo al aplicarse el herbicida La eliminacioacuten total de las hierbas alrededor de la planta lentildeosa deja el suelo desnudo favoreciendo

la evaporacioacuten Por ello no se deben retirar los restos de las hierbas en las escardas o siegas porque reducen la evaporacioacuten de agua y el reca-lentamiento del suelo (Papavassiliou 1991 Sack y Grubb 2002) aportan fertilidad al suelo dificultan la emergencia de futuras hierbas y dicha retirada encarece el mantenimiento

A B

Figura 7 (A) Trabajadores segando la hierba en un talud del tren de alta velocidad a Maacutelaga (Humilladero) (B) Foto del halo sin hierba alre-dedor de dos plantones de encina en Santa Cruz de Mudela Ciudad Real (Fotos Marisa Martiacutenez y Pedro Villar)

3 Proteccioacuten frente a herbiacutevoros

Los herbiacutevoros pueden dantildear y matar las plantas introducidas siendo las aves los ungulados y roe-dores los que maacutes dantildeo causan Las aves depredan baacutesicamente semillas mientras que los ungulados tanto silvestres como domeacutesticos se alimentan de plantas de cualquier edad Finalmente entre los roedores los ratones comen fundamentalmente se-millas y plaacutentulas en estadios de vida incipientes mientras que los conejos y liebres dantildean tanto a las plaacutentulas como los plantones de mayor edad Para reducir la depredacioacuten de las semillas aplicadas a voleo y favorecer su germinacioacuten conviene ente-rrar las semillas (Pentildeuelas et al 2002 Goacutemez 2004) La proteccioacuten de las plantas lentildeosas se puede lle-var a cabo bien por medio de vallas que encierran amplias zonas o bien protegiendo individualmen-te cada planta La proteccioacuten individual tambieacuten se puede practicar con las siembras puntuales Las vallas son uacutetiles para evitar los ungulados y si se entierran tambieacuten sirven para evitar a los conejos y liebres La proteccioacuten individual de cada planta se puede llevar a cabo con mallas y tubos protectores Las mallas pueden ser de plaacutestico y metaacutelicas (Figura

8) En la mayoriacutea de los casos deben ir sujetas con tutores y el borde inferior debe quedar ligeramente enterrado Los tubos protectores son de plaacutestico de entre 060 y 2 m de longitud con paredes continuas si bien cada vez se venden maacutes modelos con aguje-ros de ventilacioacuten Los tubos deben ser enterrados aproximadamente entre un cuarto y un tercio de su longitud y por ello los hacen muy uacutetiles para prote-ger siembras puntuales La principal diferencia con las mallas es que los tubos alteran significativamen-te el microclima alrededor de la planta La mayoriacutea de ellos reduce la radiacioacuten y la concentracioacuten de CO

2 e incrementa la temperatura y la humedad relati-

va del aire (Bergez y Dupraz 2000 Bellot et al 2002 Oliet y Jacobs 2007) Esta alteracioacuten del microclima aeacutereo de la planta puede tener efectos desiguales para el establecimiento de las especies En general para las especies lentildeosas pioneras de la sucesioacuten que son mayoritariamente helioacutefilas los tubos pro-tectores no incrementan la supervivencia e incluso la pueden reducir Plantas como el romero las jaras la retama o los pinos mediterraacuteneos no tienden a be-neficiarse de los tubos protectores En cambio para especies intermedias y tardiacuteas de la sucesioacuten que se reclutan en micrositios con una cierta sombra

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como la encina el madrontildeo o especies caducifolias los tubos protectores incrementan la supervivencia y el crecimiento (Oliet et al 2003 Pueacutertolas et al 2010) especialmente si los tubos tienen agujeros de ventilacioacuten (Figura 9) La ventilacioacuten reduce la

temperatura e incrementa la concentracioacuten de CO2

Los tubos protectores deben ser retirados cuando las plantas hayan superado ampliamente la longitud del tubo y se puedan mantener erguidas por siacute solas una vez retirado el tubo

VIII PREGUNTAS CLAVE

iquestNecesito introducir plantas lentildeosas para cumplir mis objetivos de revegetacioacuten

Es muy recomendable especialmente en ambientes mediterraacuteneos ya que aceleran la sucesioacuten secun-daria en muchos casos permiten una integracioacuten funcional y paisajiacutestica de la infraestructura lineal mejor que las herbaacuteceas y su mantenimiento si estaacuten bien seleccionadas es menor que en las her-baacuteceas

En caso de que se decida revegetar con lentildeosas iquestcuaacuteles son los principales limitantes para el desarrollo de los plantones en la obra y queacute medidas correctoras puedo tomar para reducirlas

El estreacutes hiacutedrico el friacuteo la baja fertilidad y la compactacioacuten del suelo la competencia con las especies herbaacuteceas o el dantildeo producido por los herbiacutevoros son los mayores problemas en el establecimiento de lentildeosas Las medidas dependeraacuten de las caracteriacutesticas ecoloacutegicas de las especies que se implanten pero en general usar plantas y semillas de calidad plantar en la eacutepoca adecuada y en micrositios de mayor disponibilidad de recursos en conjunto con la proteccioacuten contra los herbiacutevoros y la eliminacioacuten de las especies herbaacuteceas en los hoyos de plantacioacuten es suficiente para asegurar un buen nivel de eacutexito en la plantacioacuten

iquestQueacute criterios debo tener en cuenta a la hora de seleccionar las especies y los materiales de reproduccioacuten

La seleccioacuten de especies debe tener en cuenta que estas esteacuten adaptadas a los factores de estreacutes dominantes en la zona y debe incluir diversas es-pecies para incrementar la diversidad y resistencia a las perturbaciones de la zona restaurada Lo maacutes sencillo es escoger especies y materiales de reproduccioacuten que se desarrollen de forma natu-ral en las cercaniacuteas de la obra o en zonas con caracteriacutesticas climaacuteticas similares El material de

reproduccioacuten debe ser de calidad es decir con las caracteriacutesticas morfofisioloacutegicas adecuadas a la zona sin enfermedades ni deformaciones en las raiacuteces

iquestConviene regar o fertilizar

El riego no es estrictamente necesario si se han seleccionado las especies lentildeosas adecuadas la revegetacioacuten se hace en la eacutepoca debida el reacutegi-men de precipitaciones es normal y el material de reproduccioacuten es de buena calidad No obstante el riego se puede plantear en climas muy secos o en antildeos maacutes secos de lo normal En caso de tener suelos muy pobres se puede fertilizar pero siempre con dosis bajas La fertilizacioacuten depende-raacute de las caracteriacutesticas iniciales del sitio o de si existen sitios especialmente feacutertiles donde poda-mos plantar

iquestCoacutemo dispongo mis plantas en el espacio

Depende de si las especies seleccionadas son pioneras o maacutes tardiacuteas en la sucesioacuten y de su estrategia para resistir la sequiacutea Las primeras es-pecialmente si no tienen raiacuteces profundas se pue-den plantar en suelos maacutes pobres en nutrientes y en lugares que retengan menos humedad En cambio las especies maacutes tardiacuteas en la sucesioacuten y menos resistentes a la sequiacutea requieren lugares maacutes feacutertiles y huacutemedos como el pie del talud zonas llanas y menos expuestas a la insolacioacuten

iquestSon necesarias preparaciones del suelo

Son muy importantes cuando el suelo estaacute muy compactado de modo que dificulte el enraiza-miento y la infiltracioacuten del agua Las prepara-ciones someras son poco uacutetiles y lo miacutenimo que se debe realizar son ahoyados de 40 x 40 x 40 cm Dependiendo de la pendiente es preferible el uso de maquinaria ya que permite prepara-ciones maacutes intensas y el rendimiento de trabajo es mayor

A B

C D

Figura 8 Diferentes modelos de tubos protectores En la imagen (A) se muestra un tubo protector de 180 m sujeto con dos postes y protegido todo ello con malla metaacutelica Este sistema estaacute pensado para evitar los dantildeos causados por grandes herbiacutevoros Las imaacutegenes B y C muestran dos tipos de tubos protectores de O6 m agujereados para favorecer su ventilacioacuten La imagen D muestra una malla de plaacutestico usada frente a pequentildeos herbiacutevoros como conejos y liebres que afecta poco al microclima de la planta (Fotos Pedro Villar)

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X UN EJEMPLO DE EacuteXITO

iquestDoacutende

Almoguera (Guadalajara) sobre margas yesiacuteferas con una precipitacioacuten y temperatura media anual de 415 mm y 134 degC respectivamente

iquestQueacute se hizo

Se plantaron en enero plantones de Quercus ilex (encina) de una savia que se repartieron en tres tratamientos de proteccioacuten de la planta dos tipos de tubos protectores ventilado y sin ventilacioacuten y un control (sin tubo protector) El tubo protector usado fue regTubex-Press 065 de 60 cm de longi-tud y transluacutecido El tubo ventilado se consiguioacute practicando agujeros de 25 cm de diaacutemetro a dos niveles a 10 y 40 cm del borde superior A cada altura se hicieron cuatro agujeros La preparacioacuten del suelo consistioacute en subsolados a 60 cm de

IX ERRORES HABITUALES

Uso de especies y procedencias no adaptadas a las condiciones locales

Frecuentemente se usan las mismas especies nor-malmente las maacutes faacuteciles de conseguir por igual en todas las obras y dentro de una obra su distribu-cioacuten no sigue criterios con base ecoloacutegica Esto es un error muy grave ya que seleccionar especies y dentro de estas las procedencias mejor adaptadas a las condiciones ambientales locales es fundamental para el eacutexito de la revegetacioacuten (veacutease apartado II)

Meacutetodos y eacutepocas de revegetacioacuten inadecuados

No se debe usar como meacutetodo principal de revege-tacioacuten la siembra de plantas lentildeosas de semillas pe-quentildeas o de baja capacidad germinativa El uso de estaquillas se desaconseja en ambientes muy secos Por otro lado las obras de infraestructuras linea-les habitualmente tienen plazos de ejecucioacuten muy constrentildeidos en los que a menudo los trabajos de revegetacioacuten se ven abocados a realizarse en eacutepo-cas inadecuadas para el establecimiento de las plan-tas Cualesquiera que sean las especies empleadas plantar o sembrar en una eacutepoca inadecuada (muy cerca o durante el verano en mitad del invierno en estaciones muy friacuteas) conduce al fracaso La revege-tacioacuten debe hacerse en los periacuteodos huacutemedos del antildeo y no muy friacuteos (veacutease apartado III)

Mala calidad de planta

Las caracteriacutesticas morfoloacutegicas fisioloacutegi-cas y sanitarias de las plantas determinan su

capacidad de establecimiento El uso de plantas enfermas con una morfologiacutea inadecuada raiacute-ces deformadas poco fertilizadas y cultivadas en contenedores muy pequentildeos y con cepello-nes secos en el momento de la plantacioacuten es una garantiacutea de fracaso Los plantones deben estar morfoloacutegicamente bien proporcionados sanos y sin heridas y deben tener un cepe-lloacuten compacto y sin deformaciones en las raiacuteces para que no se desequen recalienten o se gol-peen durante su transporte y permanencia en la obra (veacutease apartado IV)

Malas (o ausencia de) preparaciones del suelo y condiciones edaacuteficas muy limitantes

La falta de preparaciones del suelo o bien prepa-raciones muy someras que no consigan reducir la compactacioacuten del suelo y aumenten el volumen efectivo de enraizamiento asiacute como la baja ferti-lidad edaacutefica son factores que limitan el estable-cimiento incluso de las especies maacutes resistentes (veacutease apartado VI)

Ausencia de cuidados posplantacioacuten

Al finalizar la plantacioacuten o la siembra se deben procurar una serie de cuidados encaminados a aportar recursos crear las condiciones y mini-mizar las interacciones negativas con otros or-ganismos hasta que la planta se establezca y pueda seguir desarrollaacutendose por siacute sola (veacutease apartado VII)

Figura 9 Influencia del tipo de tubo protector (sin tubo tubo sin ventilacioacuten y tubo ventilado) en la su-pervivencia de Quercus ilex (encina) al final del primer verano La figura estaacute hecha a partir de los datos de Nicolaacutes et al (1997)

70

60

50

40

30

20

10

0

Sin tubo protector Tubo protector sin ventilacioacuten Tubo protector con ventilacioacuten

Supe

rviv

enci

a (

)

profundidad y no se aplicoacute ninguacuten riego (Nicolaacutes et al 1997)

iquestQueacute ocurrioacute

Los tubos protectores especialmente los venti-lados aumentaron significativamente la supervi-vencia con respecto al control despueacutes del primer verano cuya supervivencia al comienzo del otontildeo fue tan solo del 5 Se atribuye la elevada su-pervivencia (~60) de las encinas en los tubos ventilados con respecto al control (Figura 9) por-que redujeron la radiacioacuten un factor que cuando se da en combinacioacuten con estreacutes hiacutedrico causa la fotoinhibicioacuten de los fotosistemas de la planta reduciendo en consecuencia su capacidad foto-sinteacutetica Ademaacutes el microclima dentro del tubo ventilado fue menos desecante que el del tubo sin ventilacioacuten

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Ecotecnologiacutea aplicada a la restauracioacuten de infraestructuras de transporte

Santiago Soliveres Valentiacuten Contreras Joatildeo Paulo Fernandes Jordi Cortina Pablo Garciacutea-Palacios Marisa Martiacutenez y Jorge Fort

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IacuteNDICE

CAPIacuteTULO 7 Ecotecnologiacutea aplicada a la restauracioacuten de infraestructuras de transporte

Santiago Soliveres Valentiacuten Contreras Joatildeo Paulo Fernandes Jordi Cortina Pablo Garciacutea-Palacios Marisa Martiacutenez y Jorge Fort

I INTRODUCCIOacuteN Y OBJETIVOS

La ecotecnologiacutea1 es un concepto surgido a princi-pios de la deacutecada de los sesenta La definicioacuten de este teacutermino ha generado mucha discusioacuten en la lite-ratura cientiacutefica debido principalmente a la amplitud de campos donde estas teacutecnicas pueden aplicarse Entre las definiciones maacutes aceptadas y aplicables al contexto de la restauracioacuten de infraestructuras li-neales estaacute la que define ecotecnologiacutea como la aplicacioacuten de principios pertenecientes a la ingenie-riacutea (disentildeo monitorizacioacuten y construccioacuten) para de-sarrollar nuevas teacutecnicas usando normalmente como base material vegetal que permitan acelerar la res-tauracioacuten ecoloacutegica y paisajiacutestica de aacutereas gravemen-te degradadas Pese a ser un concepto relativamente nuevo el uso de materiales vegetales para reducir la erosioacuten en ingenieriacutea civil viene practicaacutendose des-de antiguo las primeras referencias del uso de este tipo de materiales en China datan desde hace maacutes de 2000 antildeos siendo ya ampliamente utilizadas en Europa desde el siglo xvi (Lewis 1999) El uso de estas tecnologiacuteas es recomendable cuando los procesos naturales o el manejo de estos no son su-ficientes para asegurar la estabilizacioacuten y posterior restauracioacuten de las obras Otras partes del presente libro definen cuaacuteles son los procesos naturales que intervienen en la colonizacioacuten vegetal y coacutemo pode-mos ayudar a acelerarlos (Capiacutetulos 5 y 6) por lo que en este capiacutetulo nos centraremos en la discusioacuten

1 En este capiacutetulo nos referiremos a ecotecnologiacutea como sinoacutenimo de bioingenieriacutea Una discusioacuten maacutes detallada de estos conceptos estaacute maacutes allaacute del aacutembito de este manual

de las medidas ecotecnoloacutegicas aplicadas maacutes co-muacutenmente cuando estos procesos estaacuten limitados

Las medidas ecotecnoloacutegicas disponibles son nume-rosas y variadas pero las empleadas en taludes de obras de infraestructuras lineales presentan cinco objetivos fundamentales a) restituir la capacidad de los taludes para retener el agua y el suelo b) inte-grarlos visualmente c) facilitar la colonizacioacuten y es-tablecimiento de la vegetacioacuten d) reducir los costes de mantenimiento y e) aumentar la seguridad vial En este capiacutetulo hemos organizado estas teacutecnicas en funcioacuten de los procesos geoecoloacutegicos sobre los que actuacutean englobaacutendolas en cuatro grandes grupos

bull Teacutecnicas destinadas a evitar la erosioacuten donde es im-posible establecer una cubierta vegetal suficiente

bull Teacutecnicas destinadas a incrementar la fertilidad del suelo para fomentar una mayor cobertura y produccioacuten vegetal

bull Teacutecnicas para facilitar la llegada y establecimiento de nuevas especies normalmente herbaacuteceas alliacute donde la colonizacioacuten natural se ve dificultada

bull Teacutecnicas destinadas a la introduccioacuten y estable-cimiento de especies de aacuterboles y arbustos para acelerar la sucesioacuten secundaria reduciendo asiacute los costes de mantenimiento de los taludes

La utilizacioacuten de plantas y de vegetacioacuten como mate-rial de construccioacuten presenta ventajas pero tambieacuten limitaciones que interesa tener siempre presentes (Tabla 1)

Tabla 1 Ventajas e inconvenientes de las plantas y de los materiales inertes como materiales de construccioacuten

UTILIZACIOacuteN DE LA VEGETACIOacuteN COMO MATERIAL DE CONSTRUCCIOacuteN

UTILIZACIOacuteN DE MATERIALES INERTES COMO MATERIAL DE CONSTRUCCIOacuteN

VENTAJAS DESVENTAJAS VENTAJAS DESVENTAJAS

Normalmente no estaacute afectada por procesos de degradacioacuten Pueden proporcionar una estabilizacioacuten creciente y presentar una capacidad regenerativa intriacutenseca

Cumple su funcioacuten protectora de un modo elaacutestico absorbiendo los elementos y acciones lsquoagresivasrsquo disminuyendo o anulando su intensidad

Ayuda a restituir funciones bioloacutegicas y ecoloacutegicas

Tiene una mayor integracioacuten esteacutetica y paisajiacutestica

No cumple en todas las situaciones las exigencias de consolidacioacuten y seguridad requeridas

Es maacutes sensible a las condiciones ambientales del sitio y sus variaciones temporales

Solo alcanza su plena eficiencia teacutecnica tras un cierto intervalo de tiempo

Son maacutes estables

Son maacutes independientes de las caracteriacutesticas del sitio y su aplicacioacuten no estaacute limitada temporalmente

Funcionan mejor a corto plazo

No poseen capacidad de autorregeneracioacuten por lo que tienden a perder su eficiencia a largo plazo

Funcionan como estructuras constructivas riacutegidas o muy poco deformables frente a las condiciones ambientales

Constituyen normalmente elementos extrantildeos en el paisaje

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IacuteNDICE

Estas teacutecnicas consisten en la aplicacioacuten de sistemas vegetativos combinados o no con otros materiales o sistemas constructivos dirigida a consolidar zonas inestables recuperar aacutereas degradadas y encuadrar otras intervenciones constructivas Nunca estaacute de maacutes enfatizar que el objetivo de la ecotecnologiacutea no son las teacutecnicas y materiales constructivos com-plementarios sino la instalacioacuten eficaz de la vege-tacioacuten y que por tanto en las ocasiones donde la instalacioacuten de vegetacioacuten pueda darse sin ayuda de estas teacutecnicas en el tiempo y forma adecuados es-tas no seraacuten necesarias (Figura 1) Por ejemplo las mantas orgaacutenicas o los muros de gaviones deben ser considerados como apoyos transitorios hacia la plena instalacioacuten de la vegetacioacuten con excepcioacuten de

las situaciones en que expliacutecitamente la naturaleza del factor de riesgo o del problema que se propone resolver impliquen la necesidad de una estructura inerte que complemente a largo plazo la accioacuten de la vegetacioacuten cuando esta sea incapaz de asegurar las condiciones de seguridad exigidas Por tanto en las condiciones en que no sea necesaria esta estructura de apoyo y la vegetacioacuten se pueda instalar por siacute sola esta teacutecnica no seriacutea necesaria

El objetivo principal de este capiacutetulo es familiarizar a los lectores con las principales medidas ecotec-noloacutegicas disponibles describir su funcionamiento y modo de aplicacioacuten e identificar las condiciones oacuteptimas para su aplicacioacuten

Figura 1 Aacuterbol de criterios generales que debe seguir un proceso de toma de decisiones para la restauracioacuten de una infraestructura lineal dependiendo de los casos particulares a los que nos enfrentemos Las diferentes medidas se detallan maacutes adelante en este capiacutetulo

Antes de la obra 1 Minimizar afeccioacuten de la obra

- Dejar aacutereas cercanas a la obra con vegetacioacuten natural intacta

- Dejar tanto como sea posible franjas de vegetacioacuten en los bordes del talud

- Procurar que la obra tenga impacto sobre la menor superficie posible

- Reducir las pendientes de los taludes tanto como sea posible

2 iquestEstablecimiento vegetal posible de forma natural

3 iquestEs posible asegurar el establecimiento vegetal mediante topsolling

4 Condiciones ambientales retrasan colonizacioacuten vegetal

Aplicar topsolling

No intervenir

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SIacute

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NO

NO

NO

Aplicar medidas ecotecnoloacutegicas

5 Condiciones ambientales imposibilitan colonizacioacuten vegetal (elevadas pendientes sustrato de roca viva)

Geomallas muros gaviones

a) baja fertilidad del suelo

b) fuentes de semillas lejanas

c) elevado peligro de erosioacuten

hidrosiembra con especies locales plantacioacuten de lentildeosas

geosinteacuteticos fajinas mantas orgaacutenicas (dependeraacute del caso)

fertilizar (orgaacutenicoinorgaacutenico) mantas orgaacutenicasSIacute

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II TEacuteCNICAS DESTINADAS A EVITAR PROCESOS EROSIVOS

Durante la ejecucioacuten de la obra y antes de la aplicacioacuten de estas teacutecnicas deberaacuten tenerse en cuenta aquellas medidas anteriormente apunta-das para minimizar el impacto de la obra sobre la vegetacioacuten y la resistencia del talud a la ero-sioacuten Esto es reducir al maacuteximo las pendientes de los taludes y la destruccioacuten de la vegetacioacuten circundante Pero en muchas ocasiones y a pesar de estos esfuerzos las caracteriacutesticas de deter-minados taludes (pendientes muy pronunciadas estructura rocosa etc) hacen necesario aplicar teacutecnicas especiales para evitar procesos erosivos y problemas de estabilidad Esto facilita a su vez la integracioacuten del talud en el entorno y la colonizacioacuten vegetal con ciertas garantiacuteas de eacutexi-to Son muchas las teacutecnicas disponibles para el control de la erosioacuten pudiendo utilizarse por siacute solas o en combinacioacuten con la introduccioacuten de especies herbaacuteceas y lentildeosas (pe tierra arma-da) o junto con otras teacutecnicas ecotecnoloacutegicas para incrementar el eacutexito de la restauracioacuten (pe muros verdes) Cabe destacar la necesidad de di-ferenciar los conceptos de estabilizacioacuten de talu-des y proteccioacuten frente la erosioacuten superficial La mayoriacutea de sistemas que se describiraacuten en este capiacutetulo son aptos para mitigar procesos erosivos que generen un problema de estabilidad pero siempre deben ser utilizados en taludes construc-tivamente estables A continuacioacuten se presentan las medidas maacutes utilizadas con recomendaciones especiacuteficas sobre su aplicacioacuten Antes de leer so-bre estas medidas referimos al lector al Capiacutetulo 2 de este manual donde se detallan algunas con-sideraciones geomorfoloacutegicas que atantildeen al uso de estas teacutecnicas

1 Mallas o enrejados metaacutelicos

Son estructuras metaacutelicas de alta resistencia a la rotura Se utilizan para evitar la caiacuteda de piedras sobre la calzada Solo son recomendables cuando se pretende detener la erosioacuten de bolos o elemen-tos gruesos del talud pero no son uacutetiles para re-tener los finos Para retener estos se recomienda combinar mallas metaacutelicas geomallas tridimensio-nales y mantas o redes orgaacutenicas (explicadas maacutes adelante) como soporte de trepadoras y de elemen-tos naturales que colonicen el talud Esta teacutecnica mixta estaacute dando buenos resultados mejorando el establecimiento vegetal y la integracioacuten paisajiacutestica (Figura 2)

Figura 2 Manta orgaacutenica combinada con un enrejado metaacutelico en un talud del polideportivo de Alhama Granada

2 Sistemas tridimensionales geomallas volumeacutetricas

La geomalla volumeacutetrica es un sistema tridimen-sional formado por distintas mallas termosoldadas con componentes tratados para resistir radiaciones ultravioleta y que conserva sus caracteriacutesticas me-caacutenicas durante no menos de siete antildeos Permiten trabajar con pendientes de maacutes de 40deg y son muy eficaces en el control de erosioacuten gracias a la reten-cioacuten de finos

Las mallas volumeacutetricas se utilizan en taludes sobre todo de desmonte donde no se pueda rea-lizar una aportacioacuten de tierra vegetal adecuada para crear suelo en taludes con material pedre-goso abundante terrenos margosos bocas de tuacuteneles etc Tambieacuten son muy utilizadas en tra-tamientos de sistemas fluviales encauzamiento de barrancos proteccioacuten de cauces con riesgo de avenidas en combinacioacuten con otros tratamientos

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de bioingenieriacutea como los lechos de ramaje vivo biorrollos estaquillados etc Poseen altas prestaciones a unas condiciones hidraacuteulicas de-terminadas y calculadas despueacutes de realizar las distintas comprobaciones de estabilidad estaacutetica rugosidad hidraacuteulica y estabilidad dinaacutemica del sistema El espesor miacutenimo que deben tener es-tas mallas es de 20 mm y la apertura de malla miacutenima debe ser le10 mm Sobre estas mallas se realiza una proyeccioacuten de sustrato posterior com-puesta habitualmente por turba fibra de coco fibra de madera estabilizante fertilizantes orgaacute-nicos y semillas de plantas adaptadas a las con-diciones del sitio Esta proyeccioacuten permite crear un lecho de siembra adecuado en taludes con ausencia de tierra vegetal permitiendo la germi-nacioacuten y desarrollo de las plantas en el periodo maacutes criacutetico de establecimiento favoreciendo el desarrollo del sistema radicular en el interior del talud y creando un entramado integral de raiacuteces-suelo-geomalla que muestra una elevada resis-tencia a la traccioacuten

Son sistemas ideados para permanecer en el tiempo sin variar sus caracteriacutesticas mecaacutenicas donde la re-vegetacioacuten y regeneracioacuten se va a establecer a largo plazo Son particularmente interesantes en aquellas situaciones en las que otros tipos de sistemas orgaacute-nicos no funcionan debido a que se degradan y pier-den sus propiedades Este sistema es muy utilizado en sistemas combinados para la estabilizacioacuten de taludes conjuntamente con mallas de triple torsioacuten redes de cable etc

3 Sistemas de confinamiento celular geoceldas

Sistema de confinamiento celular estructurado por tiras de polietileno de alta densidad texturi-zadas y perforadas para aumentar la rugosidad y facilitar el drenaje termosoldadas a una distan-cia determinada para la formacioacuten de alveacuteolos Su estructura en forma de acordeoacuten bidimensio-nal una vez abierta forma un sistema alveolar que permite retener distintos tipos de materia-les Este sistema puede albergar espesores de tierra vegetal de entre 5 y 20 cm dependiendo de la anchura de las cintas permitiendo realizar plantaciones y siembras en su seno Su principal inconveniente es que solo se puede emplear en

pendientes de hasta 35deg ya que su relleno va a estar supeditado a la cohesioacuten y al aacutengulo de rozamiento interno del suelo Este tratamiento suele ser inviable en desmontes debido a las pendientes acusadas que suelen presentar Por el contrario es muy utilizado en canalizaciones y encauzamiento de barrancos donde las pendien-tes no suelen superar los 30deg

4 Mantas orgaacutenicas

Son productos relacionados con los geotextiles y estaacuten compuestos por mallas y fibras naturales (pe fibra de coco yute paja esparto) o sinteacuteticas (pe polipropileno) Se emplean para aplicaciones geoteacutecnicas de control de la erosioacuten y de mejora de las condiciones del suelo Su composicioacuten (muy variable seguacuten el tipo y disposicioacuten de las mallas y fibras utilizadas) condicionaraacute su potencialidad y las teacutecnicas de aplicacioacuten Sirven para frenar la erosioacuten laminar sobre taludes rellenar regueros como revestimiento de muros soporte de trepa-doras etc Estas mallas favorecen la formacioacuten de suelo mediante la retencioacuten de finos en escorren-tiacuteas y el aporte de materia orgaacutenica al suelo tras su descomposicioacuten Tienen la ventaja de controlar la evaporacioacuten regulando la temperatura y aumen-tando la infiltracioacuten de agua de lluvia en el suelo de manera que mejora las condiciones de humedad en zonas de xericidad acusada Se emplean para dar coherencia a las partiacuteculas de suelo fijando a su vez la vegetacioacuten espontaacutenea o hidrosem-brada sobre el mismo Pueden ser prescritas para situaciones muy diversas de erosioacuten laminar alta cunetas y caacutercavas restauracioacuten de maacutergenes de riacuteos o taludes con pendientes de entre 25-45deg Las mantas orgaacutenicas deben ser permeables a los ele-mentos finos del suelo y a la recepcioacuten de semillas tanto aportada artificialmente como la dispersada de manera natural (Figura 3) En el caso de que tengamos suelos de granulometriacutea gruesa o vegeta-cioacuten ya establecida se recomiendan mallas o redes orgaacutenicas yo sinteacuteticas Dada la adaptabilidad de la manta a las irregularidades del terreno se puede forrar el contorno de las caacutercavas y barranqueras y con el apoyo de encadenados de piedra o fajinados vegetales (lsquoplantas vivasrsquo) o artificiales (biorrollos) para dar solucioacuten a restauraciones de cabeceras de cuenca y encauzamientos de gran aplicacioacuten en el control de avenidas

Figura 3 Red orgaacutenica de fibra de coco instalada un tramo de AVE en Humilladero (Maacutelaga) Obseacutervese coacutemo la manta permite la ger-minacioacuten de las especies herbaacuteceas

Es fundamental elegir el tipo de manta adecuado pues a los limitantes comentados anteriormente se debe antildeadir el riesgo de que se degrade con excesiva rapidez arrastrando los soacutelidos acumu-lados y la vegetacioacuten existente Si estas mantas se refuerzan con mallas sinteacuteticas de gran du-racioacuten se pueden utilizar incluso sobre taludes muy verticales situaciones donde hasta ahora no se interveniacutea en prevencioacuten de la erosioacuten eoacutelica e hiacutedrica

5 Mallas o redes orgaacutenicas yo sinteacuteticas

Son al igual que las mantas orgaacutenicas productos relacionados con los geotextiles de composicioacuten de fibras similares (coco yute o polipropileno) pero que por definicioacuten sus elementos constituti-vos (hilos) son porcentualmente menores que sus huecos por lo que se emplean como elementos de refuerzo en aplicaciones geoteacutecnicas y de res-tauracioacuten de la vegetacioacuten ya que entre la luz de malla se originaraacuten pequentildeos diques de conten-cioacuten de las microcaacutercavas del talud que facilitaraacuten el paso de vegetacioacuten nacida Son por ello un recurso diferente de las mantas orgaacutenicas al ser especialmente indicadas para el refuerzo de otros productos geoteacutecnicos o de terrenos de granu-lometriacutea gruesa que quedaraacuten en parte retenidos entre sus huecos facilitando a la vez el paso de

la vegetacioacuten nacida o sembrada sobre eacutel mejo-rando de esta manera la implantacioacuten vegetal En particular las redes orgaacutenicas de coco tienen una gran adaptabilidad y flexibilidad generando bue-nos resultados en desmontes de margas arcillas etc poco pedregosos Como todos los soportes estas redes pueden ser instaladas fuera de eacutepocas de siembra de forma que se inicie la proteccioacuten superficial de los taludes antes del establecimien-to vegetal

6 Estabilizacioacuten y revegetacioacuten de taludes mediante sistemas flexibles

Se trata de una combinacioacuten de las teacutecnicas an-teriormente descritas geomallas tridimensionales mantas o redes con mallas de triple torsioacuten red de cable cable de refuerzo y bulones Esta com-binacioacuten se emplea cuando una teacutecnica individual no es capaz de solucionar todos los problemas de erosioacuten y estabilizacioacuten por siacute misma Gracias a sus caracteriacutesticas permite reunir las condicio-nes adecuadas para una posterior revegetacioacuten e integracioacuten visual del talud sustituyendo teacutecnicas maacutes agresivas como muros escolleras o gunita-dos

7 Muros de pie

Son elementos estructurales de la obra necesarios para lograr la estabilidad de los taludes Permiten disminuir la pendiente de los taludes hasta alcan-zar el equilibrio estaacutetico disminuyendo la veloci-dad de escorrentiacutea del agua de lluvia y facilitando la restauracioacuten vegetal Estos muros pueden ser ejecutados a base de gaviones metaacutelicos de mam-posteriacutea de escolleras de tierra reforzada (muros verdes) o de estructuras de madera Requieren un caacutelculo estructural previo Se pueden emplear en taludes muy verticales o que presenten alguacuten pro-blema de estabilidad o de falta de espacio para su ejecucioacuten (Figura 4) Presentan la ventaja de que al disminuir la altura de caiacuteda libre de las tierras pueden servir de soporte de estas presentando mejores posibilidades de revegetacioacuten y estabi-lizacioacuten del talud Es conveniente utilizarlos en combinacioacuten con geotextiles o mantas orgaacutenicas para evitar la peacuterdida de suelo a traveacutes del muro y facilitar el drenaje

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Figura 4 Muro vegetal de acondicionamiento de acceso a Fornes Granada

8 Fajinas o fajinados

Pueden ser prefabricados industriales a base de fi-bras naturales constituyendo lo que se han venido a llamar biorrollos Pero tambieacuten pueden ser fabrica-dos in situ de forma tradicional a base de manojos de ramas o tallos atados en forma de huso que se colocan sobre bermas o zanjas poco profundas Los biorrollos son estructuras prefabricadas de forma industrial perfectamente ciliacutendricas Se elaboran a base de fibras generalmente naturales (coco espar-to o paja) envueltas en mallas o redes de coco o de polipropileno Tienen la ventaja de su maleabilidad que les permite adaptarse a las irregularidades del terreno como caacutercavas Tienen una elevada capaci-dad para retener finos y semillas arrastradas y faci-lidad de suministro e instalacioacuten

Respecto a las fajinas elaboradas en el tajo median-te materiales locales las fajinas comerciales evitan la necesidad de desbroce o poda y el tiempo y es-fuerzo dedicados a ello Las fajinas de madera o ramas se han usado desde antiguo para el control de la erosioacuten Para ello se suelen emplear tallos de ramas lentildeosas con gran capacidad de enraizamiento que deben ser flexibles largas rectas y con yemas de crecimiento activas que se disponen paralelas al perfil del talud y se entierran someramente (veacuteanse imaacutegenes de ejemplo en httpwwwwsdotwagov Mataix 2003) El uso de estas fajinas vivas solo tie-ne sentido en lugares donde la humedad del suelo permite el enraizamiento En situaciones de sequiacutea o escasa disponibilidad de material se pueden em-plear restos de poda de aacuterboles cercanos (Soliveres et al 2008)

Este tratamiento da buenos resultados a medio-largo plazo siendo necesaria la aplicacioacuten de otras teacutecni-cas (hidrosiembras mantas orgaacutenicas etc) para re-ducir la erosioacuten a maacutes corto plazo al objeto de com-pletar el tratamiento recubriendo el espacio existente entre fajinas Estas estructuras estaacuten disentildeadas para controlar la erosioacuten derivada del flujo laminar de agua en cauces y reducir la escorrentiacutea superficial en taludes soportando velocidades de agua superiores a 15 ms-1 Esta teacutecnica ha sido recomendada para la creacioacuten de franjas donde implantar vegetacioacuten en las orillas de cauces de riacuteos crear lsquobioislasrsquo y reve-getar zonas pantanosas (Lewis 1999) Su colocacioacuten a lo largo de la orilla es raacutepida y sencilla fijaacutendose habitualmente mediante estacas de madera Las fa-jinas ademaacutes contribuyen a mejorar el eacutexito de las plantaciones de lentildeosas en taludes de pendientes de menos de 35deg ya que a) fraccionan los taludes (ha-bitualmente cada 8 o 15 m) de manera que atenuacutean los problemas de arrastre y escorrentiacuteas fuertes b) actuacutean como drenajes intermedios reduciendo la for-macioacuten de regueros y caacutercavas y c) crean un micro-clima benigno para el crecimiento de la vegetacioacuten (Ludwig y Tongway 1996 Tongway y Ludwig 1996 Mataix 2003)

9 Lechos y entramados de ramas colchones de vegetacioacuten

Son estructuras que pueden ser tambieacuten fabrica-das in situ o industrialmente para colocarlas sobre lechos de cauces de riacuteos y arroyos Casi siempre se situacutean por encima de las fajinas y unidas a es-tas forman un conjunto entramado y cosido hasta formar un lecho naturalizado y estabilizado por la vegetacioacuten Para la confeccioacuten de los lechos y en-tramados de ramas es necesaria una gran cantidad de material vegetal seleccionado preferentemente vivo (en verde) que puede resultar de los trabajos de desbroce o limpieza de los cauces valorizando con ello la biomasa forestal Estas estructuras de ramas actuariacutean como un mulch evitando la erosioacuten laminar y la formacioacuten de regueros Estas estructuras ganan estabilidad si se logra el enraizamiento para lo cual es necesario que el material vegetal a) se conserve fresco b) esteacute en condiciones fenoloacutegicas favorables c) pueda cubrirse al menos parcialmen-te con tierra y d) el suelo tenga un nivel de hume-dad adecuado

Los colchones prefabricados industrialmente al igual que los biorrollos estaacuten constituidos por una malla natural o sinteacutetica generalmente de coco o polipro-pileno rellena de fibras de coco esparto o paja para

formar una estructura plana de no maacutes de 10 cm de espesor Dispuesta sobre las maacutergenes de los cauces o cosida a los biorrollos es capaz de retener la ero-sioacuten laminar o en regueros capturando finos y semi-llas y permitiendo el crecimiento vegetal hasta gene-rar un conjunto estable Estos colchones puede ser precultivados en vivero con las especies adecuadas mejorando con ello su capacidad de estabilizar de forma inmediata estas maacutergenes evitando los riesgos de arrastres por falta de implantacioacuten vegetal

10 Encachados

Son estructuras muy resistentes a las fuerzas tanto internas como externas recurrentes sobre el terre-no que se construyen al objeto de dar seguridad a los taludes y a las maacutergenes de los cauces resul-tantes de la obra Se suelen instalar sobre puntos singulares que requieren especial atencioacuten como estribos puentes pasos superiores o inferiores etc Se pueden realizar a base de mamposteriacutea trabada escolleras piezas prefabricadas en hormigoacuten y cada vez con mayor frecuencia gaviones o colchones de revestimiento ya sean riacutegidos o flexibles (Figura 5) Estos uacuteltimos los gaviones de revestimiento tienen la ventaja de presentar mayor elasticidad estructural

y su permeabilidad a la vegetacioacuten con lo que su integracioacuten paisajiacutestica es siempre posible Ademaacutes si son flexibles seraacuten especialmente recomendables en situaciones en que las tensiones de empuje y arrastre de los cauces en las entradas o salidas de las obras de faacutebrica provoquen el socavamiento ro-tura y arrastre de las estructuras maacutes riacutegidas

Figura 5 Gavionado flexible como refuerzo de la salida de un paso inferior Jabalquinto Jaeacuten

III TEacuteCNICAS DESTINADAS A INCREMENTAR LA FERTILIDAD DEL SUELO

Con frecuencia los taludes de las infraestructuras via-les son poco feacutertiles hasta el punto de que su escasa fertilidad puede dificultar la colonizacioacuten vegetal natu-ral o promovida a traveacutes de hidrosiembras y plantacio-nes Por ello el incremento de la fertilidad del suelo mediante enmiendas orgaacutenicas y fertilizantes inorgaacuteni-cos es recomendable (Valdecantos et al 2004)

1 Fertilizantes inorgaacutenicos

Los fertilizantes inorgaacutenicos utilizados maacutes frecuen-temente son de liberacioacuten lenta Estos fertilizantes son sencillos de aplicar aportan las dosis necesarias de nitroacutegeno foacutesforo y potasio nutrientes particu-larmente importantes para el desarrollo vegetal y normalmente implican el aporte de cantidades ni-mias de elementos que pudieran ser perjudiciales o contaminantes Estos fertilizantes sin embargo son faacutecilmente lavables por lo que deberiacutean ser incorpo-rados en el sustrato para facilitar su acceso y evitar la exportacioacuten por escorrentiacutea y viento evitando asiacute

su desplazamiento antes de que se produzca el esta-blecimiento y crecimiento de las especies herbaacuteceas o lentildeosas Teniendo en cuenta sus resultados y la elevada disponibilidad de enmiendas orgaacutenicas los fertilizantes inorgaacutenicos suelen emplearse exclusiva-mente como complemento a otras teacutecnicas como las hidrosiembras

2 Enmiendas orgaacutenicas

Las enmiendas orgaacutenicas tienen la ventaja de que ademaacutes de aportar nutrientes baacutesicos para las plan-tas incrementan la cantidad de materia orgaacutenica del suelo y con ello mejoran otras propiedades fiacutesico-quiacutemicas del sustrato Suelen incrementar la capacidad de retencioacuten de agua del suelo de parti-cular importancia en medios mediterraacuteneos aunque esto dependeraacute del tipo de enmienda orgaacutenica y el clima donde se aplica pudiendo llegar a darse el efecto contrario (Fuentes et al 2007) Otra venta-ja del uso de estas enmiendas es que permite la

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reutilizacioacuten de restos orgaacutenicos (residuos soacutelidos urbanos residuos procedentes de ganaderiacutea y lodos de depuradora Cortina y Vallejo 2004) Finalmen-te la incorporacioacuten de compuestos orgaacutenicos podriacutea contribuir a mejorar los resultados de otras interven-ciones ecotecnoloacutegicas como las mantas orgaacutenicas y las hidrosiembras (Fuentes et al 2002 veacutease tam-bieacuten un ejemplo de eacutexito en la descripcioacuten de las teacutecnicas de introduccioacuten de herbaacuteceas) De forma ideal las enmiendas orgaacutenicas deben ser mezcla-das con la capa maacutes superficial (aproximadamente los primeros 50 cm) del sustrato original de esta

forma evitaremos problemas de erosioacuten y de peacuterdida o lavado de la enmienda aportada reduciendo el contacto entre la planta y la enmienda

Antes de fertilizar debemos tener en cuenta que idealmente el porcentaje de materia orgaacutenica del sustrato deberiacutea estar cercano al 15 y la salinidad nunca deberiacutea superar los 4 ds m-1 Las Tablas 2 y 3 explican en detalle queacute variables y anaacutelisis de suelo deberiacuteamos considerar y queacute rangos de valores de-beremos tolerar a la hora de decidir si el suelo es uacutetil y si debemos corregir su fertilidad

Tabla 2 Propiedades fiacutesico-quiacutemicas cuyo control es recomendable para definir la calidad de un sustrato Se indican meacutetodos analiacuteticos para su determinacioacuten

VARIABLE GRADO DE IMPORTANCIA MEacuteTODO ANALIacuteTICO

Contenido de humedad

Granulometriacutea

Elementos gruesos

Textura (lt2 mm)

Densidad aparente

pH

Salinidad

Carbonatos

Materia orgaacutenica

Nitroacutegeno total

Foacutesforo asimilable

Potasio asimilable

Metales pesados

++

++

++

++

++

++

++

+

+

+

++()

Tamizado

Tamizado y sedimentacioacuten

Cubicajea

Suspensioacuten acuosa 125

CE extracto en pasta saturada

Calciacutemetro Bernard

Walkley amp Black

Kjeldahl

Olsen

Extraccioacuten en acetato amoacutenico

Tratamiento aacutecido

Los signos positivos (+) indican grado de importancia de cada indicador de calidad + aconsejable ++ necesario +++ imprescindible () uacutenicamente importante en enmiendas orgaacutenicas o tierras de procedencia desconocida a Es necesario medirlo en grandes voluacutemenes CE conductividad eleacutectrica Modificado de Jorba y Vallejo 2008

Tabla 3 Niveles recomendados de diversas propiedades fiacutesico-quiacutemicas de los substratos aptos para la restauracioacuten y liacutemites legales para su aplicacioacuten

SUELO COMPOST FANGOS EDAR

MIacuteNIMO MAacuteXIMO

Granulometriacutea ()

250-75 mm - 25 - -

75-2 mm - 75 - -

lt2 mm 20 - - -

lt0002 mm 5 - - -

Textura Clases francas - -

Densidad aparente (Tasm3) - 18 06-08 (d) 1 (d)

Carbonatos totales () - 60 -- -

pH (125) 55 87 - 55-9

MO 08 - 10 gt35 lt80

Grado de estabilidad MO ( MO seca)

- - gt35 (d) gt30 (d)

Nitroacutegeno total () 005 03 - -

Foacutesforo asimilable (mgkg) 10 50 - -

Potasio asimilable (mgkg) 50 - - -

Salinidad CE (dSm a 25 ordmC) - 4 - -

Humedad () - - 30-40 lt80

CN - - lt20 -

Cadmio (mgkg) - 15 3 10 40

Cobre (mgkg) - 100 400 1000 1750

Niacutequel (mgkg) - 70 100 300 400

Plomo (mgkg) - 100 200 750 1200

Zinc (mgkg) - 200 1000 2500 4000

Mercurio (mgkg) - 1 25 10 25

Cromo (mgkg) - 100 300 1000 1500

Modificado de Valdecantos et al 2004 Jorba y Vallejo 2008 CE conductividad eleacutectrica MO materia orgaacutenica

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Sin embargo las enmiendas orgaacutenicas presentan al-gunos problemas

bull La maquinaria normalmente utilizada para mez-clar estas enmiendas orgaacutenicas con el suelo no permite trabajar en pendientes elevadas hacien-do imposible trabajar en taludes con pendientes muy elevadas aunque esto dependeraacute del ran-go de actuacioacuten de la maquinaria disponible No obstante existe la posibilidad de mezclarlas en pilas junto con el sustrato antes del esparcimien-to de este por el talud o bien aplicarlas mediante hidrosembradora directamente sobre la superficie del talud De esta forma aumentaremos el rango de pendientes en el que estas enmiendas orgaacuteni-cas seriacutean aplicables

bull Pueden aumentar la salinidad del suelo en cli-mas secos originando problemas de toxicidad y reduciendo asiacute el crecimiento vegetal Este factor es particularmente relevante en medios medite-rraacuteneos en los que la sequiacutea estival intensifica el efecto de las sales Para evitar estos problemas se recomienda una dosis media de aproximada-mente 4 kg de enmienda orgaacutenica por m2 (Fuen-tes et al en prensa) si bien esta dosis maacutexima dependeraacute de la fertilidad del sustrato las condi-ciones climaacuteticas y el tipo de enmienda orgaacutenica utilizada A continuacioacuten se resumen los caacutelculos para estimar la cantidad de enmienda necesaria para llevar el suelo a un contenido de materia orgaacutenica de aproximadamente 15 (valor reco-mendado)

Si X = peso de compost respecto al total () A = concentracioacuten de materia orgaacutenica del subs-trato original () y Bm = concentracioacuten de ma-teria orgaacutenica de la enmienda orgaacutenica ( veacutea-se Tabla 3)

[A times (X - 100)] + [B times X] = 15

bull Debemos tener muy en consideracioacuten los conte-nidos en metales pesados de estas enmiendas ya que en muchas ocasiones las elevadas con-centraciones de zinc (Zn) cobre (Cu) y cadmio (Cd) pueden originar problemas graves de con-taminacioacuten y toxicidad del suelo (Tabla 3)Tam-bieacuten deberemos asegurarnos de que la enmien-da que apliquemos cumpla la legalidad vigente en cuanto a otras variables importantes como contenido de contaminantes orgaacutenicos y micro-organismos patoacutegenos

3 La aplicacioacuten de fertilizantes de forma heterogeacutenea es maacutes recomendable que hacerlo de forma homogeacutenea en todo el talud

Las especies vegetales difieren en sus estrategias ecoloacutegicas Esto es hay especies adaptadas a crecer en sustratos poco feacutertiles pero que no toleran la competencia con otras especies y otras que nece-sitan sustratos maacutes feacutertiles pero que gracias a sus mayores tasas de crecimiento o a su mayor habilidad para capturar los recursos disponibles son superio-res competitivamente pudiendo desplazar a otras especies en ambientes favorables El incremento de la fertilidad del suelo siempre va a favorecer a las especies competitivas En el caso de que sea el objetivo de la restauracioacuten el asegurar una maacutexima biomasa y cobertura vegetal fertilizar de forma ho-mogeacutenea seraacute la estrategia maacutes recomendable Sin embargo en ocasiones es deseable conseguir co-munidades vegetales diversas Para conseguir este objetivo debemos promover la estructura heterogeacute-nea de los ecosistemas naturales donde zonas con un elevado nivel de nutrientes estaacuten dispersas en una matriz de suelo maacutes pobre En la praacutectica para conseguir este objetivo bastaraacute con aplicar de forma heterogeacutenea (pe en bandas o manchas) cualquier medida ecotecnoloacutegica para aumentar la fertilidad Para facilitar el eacutexito de esta medida podemos uti-lizar esta aplicacioacuten heterogeacutenea en conjunto con una plantacioacutensiembra selectiva de especies con-centrando las especies pioneras en las partes no fertilizadas y las especies maacutes competitivas en zo-nas maacutes feacutertiles (Booth et al 1999) De esta forma podemos compatibilizar dos objetivos de la restau-racioacuten ecoloacutegica de los taludes de carretera esto es reducir la erosioacuten (la biomasa que crezca en la zonas maacutes fertilizadas deberiacutea ser suficiente para ello) y una mayor diversidad y aceleracioacuten de la sucesioacuten secundaria (quedaraacuten huecos libres para la llegada de nuevas especies) la aplicacioacuten heterogeacutenea de este tipo de teacutecnicas supondriacutea ademaacutes una reduc-cioacuten de costes

4 Una mayor fertilidad del suelo no siempre es positiva

Como se discute en el apartado siguiente relativo a la introduccioacuten de especies herbaacuteceas la inclusioacuten de especies de crecimiento raacutepido no siempre es recomendable ya que pueden obstaculizar la lle-gada y establecimiento de otras especies reducir la diversidad y frenar la sucesioacuten secundaria (Ma-tesanz et al 2008 Garciacutea-Palacios et al 2010)

Ademaacutes pueden conllevar la introduccioacuten de es-pecies invasoras tanto en los taludes restaurados como en las zonas cercanas generando problemas ambientales graves (Constaacuten-Nava et al 2007 Ma-tesanz et al 2008) En algunos taludes podemos encontrar suelos feacutertiles y adecuados para el cre-cimiento vegetal donde la fertilizacioacuten no es ne-cesaria Sin embargo estos taludes son sistemas proclives a albergar especies agresivas o incluso invasoras capaces de explotar al maacuteximo los re-cursos disponibles reduciendo la presencia de las demaacutes especies Esto reduce la diversidad bioloacutegi-ca de los herbazales de talud y nos aleja del ob-jetivo final de la restauracioacuten por lo que en estos casos la reduccioacuten de la fertilidad del suelo pue-de ayudarnos a reducir la presencia de especies indeseables Esta reduccioacuten de los nutrientes del suelo restaraacute habilidad competitiva a las especies agresivas permitiendo la presencia de un mayor nuacutemero de especies La medida mejor estudiada y maacutes efectiva para reducir la fertilidad del suelo es la fertilizacioacuten con carbono (ya sea azuacutecar serriacuten paja de cereal residuos de papel restos de poda

triturados etc Podeacuteis dirigiros al Capiacutetulo 4 para maacutes informacioacuten) Esta teacutecnica permite aumentar la relacioacuten entre carbono y nitroacutegeno del suelo haciendo maacutes difiacutecil para las plantas la asimilacioacuten de nitroacutegeno elemento esencial para su crecimien-to Con esta medida se puede reducir la dominan-cia de estas especies agresivas adaptadas a ob-tener de una forma maacutes raacutepida y eficaz que otras especies este nutriente del suelo Aunque desco-nocemos si ha sido probada en la restauracioacuten de taludes espantildeoles esta teacutecnica ha funcionado con eacutexito en la restauracioacuten de otros sistemas medite-rraacuteneos en California (Gillespie y Allen 2008) y en herbazales donde la fertilizacioacuten con carbono re-dujo en un 54 (Minnesota) y en un 62 (Ohio) la biomasa de especies invasoras (Bluementhal et al 2003 Averett et al 2004) El uso del material rico en carbono aplicado deberaacute estar sujeto a la cer-caniacutea de los diversos materiales anteriormente ci-tados para evitar el encarecimiento de esta medi-da y debe ser aplicada uacutenicamente en lugares con sustratos ricos donde la amenaza de dispersioacuten de estas especies invasoras o agresivas sea elevada

IV TEacuteCNICAS DESTINADAS A MEJORAR LA LLEGADA Y ESTABLECIMIENTO DE HERBAacuteCEAS (HIDROSIEMBRAS)

La introduccioacuten de especies herbaacuteceas es una de las teacutecnicas maacutes populares para la restauracioacuten de talu-des de infraestructuras lineales debido a su poten-cial capacidad para proteger el suelo a corto plazo El objetivo principal de estas teacutecnicas es aumentar raacutepidamente la cubierta vegetal a traveacutes de la siem-bra de especies vegetales de raacutepido crecimiento que deben dar paso maacutes adelante a especies peren-nes y lentildeosas tiacutepicas de etapas sucesionales maacutes avanzadas

La teacutecnica maacutes empleada para acelerar el estable-cimiento de esta cubierta herbaacutecea es la hidro-siembra Con frecuencia esta teacutecnica constituye el mayor porcentaje del presupuesto dedicado a las medidas preventivas Esta teacutecnica consiste en la proyeccioacuten sobre el terreno de una mezcla acuosa de semillas mulch fertilizantes y sustancias ad-herentes (Tabla 4) Es una teacutecnica de faacutecil aplica-cioacuten a gran escala porque se realiza con medios mecaacutenicos especializados dotados de equipos de

bombeo (Figura 6) Las siembras muestran las si-guientes ventajas

bull La vegetacioacuten se establece un 20-25 maacutes raacutepi-do que con cualquier otra alternativa mecaacutenica o siembra manual

bull El mulch de fibras vegetales del que se acompa-ntildea la hidrosiembra genera condiciones favorables para una raacutepida germinacioacuten

bull Se pueden alcanzar taludes difiacutecilmente accesi-bles

En el Capiacutetulo 5 de este manual se puede encon-trar informacioacuten detallada sobre algunas especies de hierbas que pueden funcionar en algunas zo-nas del sur sudeste y centro peninsular Ademaacutes se facilita una clave dicotoacutemica donde se describe bajo queacute condiciones es maacutes recomendable el uso de esta teacutecnica

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La hidrosiembra es una teacutecnica muy extendida para revegetar taludes de infraestructuras lineales A con-tinuacioacuten se muestran una serie de especies que ha-bitualmente forman parte de los coacutecteles de semillas que se aplican mediante esta teacutecnica En la paacutegina de la izquierda alfalfa (Medicago sativa) sobre es-tas liacuteneas de izquierda a derecha y de arriba abajo pipirigallo (Onobrychis viciifolia) Agropyron crista-tum subsp pectinatum dactilo (Dactylis glomerata) y cantildeuela (Festuca arundinacea) Cabe destacar que solo las dos uacuteltimas especies son autoacutectonas de la flora peninsular Autor Ignacio Mola

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Tabla 4 Ejemplo de composicioacuten caracteriacutestica de una hidrosiembra comercial

ESPECIES AUTOacuteCTONAS

ESTABILIZADOR ABONO MULCH TIPO DE MULCH AGUAAacuteCIDOS

HUacuteMICOS

300 kg de semillasha

20 kgha (aunque variacutea mucho en funcioacuten del tipo de producto)

400 kgha2000 kgha

Fibra corta de madera heno y alfalfa

2000 lha

100-150 kgha

Figura 6 Hidrosiembra de un talud de desmonte desde un camioacuten con moto-bomba (Foto Mariacutea Altamirano-OHL)

V INTRODUCCIOacuteN Y ESTABLECIMIENTO DE ESPECIES LENtildeOSAS

Como se ha mencionado con anterioridad (Capiacutetulo 6) la introduccioacuten de especies lentildeosas tiene gran intereacutes en la restauracioacuten ecoloacutegica La cubierta de lentildeosas puede acelerar la sucesioacuten secundaria requiere esca-so mantenimiento (disminuye la frecuencia de siegas)

mejora la integracioacuten paisajiacutestica y garantiza ciertas funciones asociadas a las plantas herbaacuteceas La Tabla 5 enumera las principales alternativas ecotecnoloacutegicas y los materiales lentildeosos vivos que se adecuan a cada una de ellas

Tabla 5 Teacutecnicas constructivas de ingenieriacutea natural y materiales lentildeosos adecuados para su implementacioacuten (adaptado de Schluumlter 1986)

MATERIAL LENtildeOSO VIVO

SISTEMAS CONSTRUCTIVOS SIMPLES

SISTEMAS CONSTRUCTIVOS COMBINADOS

Varas

Cubierta de ramas

Fajinas

Trenzados o empalizadas

Tallos y ramas

Fajinas de vegetacioacuten

Drenaje vegetado

Fajinas

Trenzados o empalizadas

Gradas de vegetacioacuten (Enrejados)

Gaviones vegetados

Muros tipo lsquoCribwallrsquo y otros muros de soporte (entramados)

Muros de piedra seca

Escolleras

Tierra armada

Estacas Estaquillado

Raiacuteces Tocones enraizados viables

Plantas enraizadasEstablecimiento de lentildeosas

Fajinas de vegetacioacuten

Semillas Siembras

Los meacutetodos de establecimiento de la vegetacioacuten son muy variados En este capiacutetulo los clasificamos en tres grandes grupos

bull Establecimiento de la vegetacioacuten sin apoyo de estructuras artificiales

bull Establecimiento de la vegetacioacuten con apoyo de estas (teacutecnicas combinadas)

bull Teacutecnicas complementarias

1 Establecimiento de la vegetacioacuten sin apoyo de estructuras artificiales

Se pueden establecer dos grupos

bull Teacutecnicas de cobertura destinadas a evitar la erosioacuten superficial mediante el incremento raacute-pido de la vegetacioacuten se discuten ampliamente en el apartado dedicado a la erosioacuten de este mismo capiacutetulo

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bull Teacutecnicas de estabilizacioacuten permiten estabilizar el terreno hasta un maacuteximo de 2 m de profun-didad aproximadamente utilizando plantas lentildeosas obtenidas por reproduccioacuten vegetativa colocadas en filas horizontales Las plantas de-ben ser capaces de emitir raiacuteces adventicias de modo que puedan originar un entramado que permita la fijacioacuten y estabilizacioacuten del terreno Estas teacutecnicas son de muy difiacutecil dimensiona-miento desde el punto de vista de los paraacute-metros mecaacutenicos por lo que es recomendable cierta experiencia para que cumplan su objetivo de forma satisfactoria

Este conjunto de teacutecnicas se aplica uacutenicamente cuando existe una garantiacutea de que durante su desa-rrollo no se produciraacuten perturbaciones que puedan generar riesgos inaceptables o cuando estos riesgos no justifiquen la utilizacioacuten de meacutetodos de estabili-zacioacuten maacutes costosos

a Estaquillados

Consisten en la utilizacioacuten de trozos de ramas verdes hincadas en el suelo Las ramas de varios antildeos deben estar sanas mostrar una con corteza fina sin ramas laterales y sin estriacuteas y deben tener una longitud media de 40-100 cm y un diaacutemetro de 2-8 cm Deben estar afiladas por un extremo para facilitar su insercioacuten hasta que apenas 5 cm emerjan de la superficie Es muy importante que la longitud sea suficiente para llegar hasta el nivel freaacutetico u horizontes edaacuteficos con suficiente hume-dad durante el verano

Esta teacutecnica permite la introduccioacuten sencilla y raacutepi-da de un gran nuacutemero de plantas que aseguraraacute a medio-largo plazo una cobertura y una estructuracioacuten radicular densa de los taludes Puede tambieacuten incluir-se en esta teacutecnica la utilizacioacuten de estacas de sauce de 2-3 m de longitud para seguridad y anclaje de los taludes de maacutergenes de riacuteos Esta teacutecnica estaacute especialmente recomendada para reparar pequentildeos deslizamientos y asentamientos debidos al exceso de humedad del suelo en lugares sin problemas gra-ves de estabilidad Tambieacuten se emplea como fijacioacuten de otros elementos de control de la erosioacuten como los geotextiles las mantas orgaacutenicas etc Tambieacuten ayuda al control de la erosioacuten permitiendo la esta-bilizacioacuten de taludes sometidos a la erosioacuten fluvial Cuando las estaquillas se han desarrollado la cubier-ta vegetal contribuye a estabilizar el talud y si las especies introducidas no son agresivas o demasiado competitivas con otras especies pueden favorecer la colonizacioacuten por otras especies del entorno Los es-taquillados se adaptan muy bien a la instalacioacuten de vegetacioacuten en escolleras por permitir una instalacioacuten posterior a la construccioacuten de la escollera aseguran-do de este modo su revegetacioacuten sin necesidad de intervenciones aparatosas o caras Solo es necesario abrir agujeros donde se introduce suelo y se clava la estaquilla garantizando que esta quede clavada en el suelo subyacente a la escollera (Figura 7)

Importa auacuten referir el intereacutes de la utilizacioacuten de esta-quillas para fines estructurales y funcionales como en empalizadas de retencioacuten de escorrentiacutea en caacutercavas (Figura 6) en cepillos o peines vivos de reconstruc-cioacuten de orillas erosionadas o en cunetas de drenaje

Figura 7 Estaquillados en escolleras (adaptado de Florineth 2004)

Estaquilla de sauce 03 - 8 cm

Paja como proteccioacuten contra el arrastre de suelo

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b Empalizada trenzada viva

Constituye junto con las fajinas la teacutecnica de maacutes diversa utilizacioacuten desde la antiguumledad Puede ser utilizada en la proteccioacuten de orillas fluviales y en la estructuracioacuten y consolidacioacuten de taludes Es tambieacuten

una teacutecnica de ejecucioacuten sencilla que consiste en la realizacioacuten de un trenzado de ramas vivas de sauce (u otras especies adecuadas a la ecologiacutea y condiciones del lugar) que se anclaraacuten al suelo mediante estacas (que pueden ser vivas) o pique-tas (Figura 8)

Figura 8 Empalizadas trenzadas vivas en la orilla de un rio (taller AEIP Orense 2008 taller Ripidurable Alpiarccedila 2007 adaptado de Florineth 2004)

Trenzado de orilla fluvial

Trenzado diagonal

Ramas de sauce trenzadas en la direccioacuten de la escorrentiacutea y con la base insertada en la orilla Ramas de sauce 3-10 cm

Trenzado horizontal

Direccioacuten de la escorrentiacutea

Estaquilla de soporte 0 12-15 cm

0

Esta teacutecnica es muy uacutetil para la proteccioacuten de orillas de riacuteos donde la velocidad maacutexima del agua sea inferior a 35 ms (hay autores que indican un liacutemite mucho maacutes bajo alrededor de 15 ms) Tambieacuten se suelen utilizar en taludes para la estructuracioacuten de la capa superficial del suelo (hasta unos 20 cm de profundidad) Esta utilizacioacuten presenta limitaciones debido a la necesidad de una elevada humedad que garantice el desarrollo vegetativo del material utilizado Como alternativa podemos utilizar mate-rial muerto para apoyar el eacutexito de plantaciones de ejemplares ya enraizados (veacutease tambieacuten el aparta-do de este capiacutetulo dedicado a las fajinas) En talu-des hay diversos modos de instalacioacuten siendo los principales las empalizadas en diagonal (Figura 9) y las empalizadas horizontales sencillas

Figura 9 Empalizada trenzada en diagonal en la consolidacioacuten de taludes

c Cobertura o estera de ramaje

Esta teacutecnica es particularmente adecuada para aumen-tar la cobertura y promover la consolidacioacuten de orillas de riacuteos donde se registra torrencialidad y velocidades muy elevadas (tensiones de arrastre superiores a 200 Nm2) Consiste en recubrir el talud con una capa de ramas de varios metros de longitud disponiendo el extremo maacutes grueso bajo el nivel del agua y la parte ramificada en la zona superior de los taludes (Figura 10) Se fijan utilizando piquetas o estacas dispuestas

en diagonal a intervalos de 15 m A estas estacas se fija un alambre grueso que se tensa al clavar las estacas presionando las ramas contra el suelo La base es a continuacioacuten consolidada con piedras en escollera (para riacuteos de elevado caudal y velocidad) o bien con fajinas o troncos de madera en riacuteos maacutes tranquilos Toda la estructura es finalmente cubier-ta con una ligera capa de suelo Su construccioacuten a pesar de ser relativamente sencilla exige cuidados particulares para garantizar su eficacia y resistencia al flujo del agua Las esteras protegen al talud de la accioacuten de la corriente y desarrollan con el tiempo una espesa franja de vegetacioacuten El rozamiento de la corriente con la estera reduce su velocidad y por consiguiente su energiacutea erosiva Las ramas detienen los materiales y sedimentos arrastrados con lo que se crea un colchoacuten protector que aiacutesla la orilla de la accioacuten directa del agua y del oleaje (Mataix 2003) No obstante es fundamental fijar bien estas esteras de ramaje al suelo ya que despueacutes de lluvias importan-tes estos materiales podriacutean ser arrastrados llegan-do a bloquear los conductos de desaguumle del talud y provocar problemas serios

Esta teacutecnica es muy exigente en material tiempo y mano de obra especializada (pe para la construc-cioacuten de la escollera es necesaria maquinaria pesa-da) por lo que solo debe ser utilizada en zonas don-de se debe garantizar una proteccioacuten inmediata y de elevada eficacia contra la erosioacuten fluvial Se adapta particularmente a la reconstruccioacuten de frentes de erosioacuten activos y a la proteccioacuten de infraestructuras como puentes y represas Hay que tener presente que esta teacutecnica solo se puede utilizar en orillas con una pendiente maacutexima de unos 30deg No se adapta a intervenciones en taludes no fluviales por su gran necesidad de agua

Figura 10 Fijacioacuten con alambres tensos (taller praacutectico Viena Austria)

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IacuteNDICE

d Lecho de ramajes

Este es un sistema claacutesico y muy eficaz de consoli-dacioacuten de taludes y pendientes Tiene la ventaja de asegurar inmediatamente una estructuracioacuten de la pendiente hasta una profundidad de 15 m aproxi-madamente Puede ser realizado mediante ramas de plantas susceptibles de crecer o en combinacioacuten con plantas enraizadas criadas en vivero Es apto para taludes de suelo desnudo y puede integrarse en muros armados de mantas orgaacutenicas La mayor limitacioacuten que presenta este meacutetodo es que son po-cas las plantas que tienen capacidad de desarrollo vegetativo en condiciones de baja humedad que suelen presentar los taludes y laderas en medios mediterraacuteneos En estos ambientes es recomendable utilizar solo planta cultivada en contenedor o en su defecto plantas a raiacutez desnuda (veacutease Capiacutetulo 6)

La construccioacuten de lechos de ramaje es muy senci-lla Se empieza por excavar una primera berma con

una contrapendiente superior de 5deg y una profun-didad entre 05-15 m (Figura 11) Se disponen en-seguida las ramas y eventualmente las plantas ya enraizadas (de longitud igual o superior a la pro-fundidad de la berma) de modo que cubran la ber-ma Las ramas deben sobresalir del terreno unos 10 cm para favorecer el rebrote Finalmente se abre una nueva berma 15-30 metros maacutes arriba utilizando el suelo extraiacutedo para rellenar la berma inferior este procedimiento se repite hasta culmi-nar la pendiente Estos lechos se adaptan tambieacuten a sistemas constructivos combinados como son los muros verdes armados de mantas orgaacutenicas donde se utilizan los lechos de ramajes entre las lsquoalmohadasrsquo o tongadas de suelo introducido (Fi-gura 11) Esta teacutecnica se adapta a la construccioacuten de muros verdes inclusive muros de proteccioacuten contra el ruido aunque no son nada recomenda-bles en medios secos ya que el establecimiento de plantones o estaquillas de este tamantildeo es muy difiacutecil en estos medios

Figura 11 Muro verde de tongadas de suelo introducido en mantas orgaacutenicas con lechos de ramaje entre las tongadas (Meran Austria to-mado de Florineth 2004)

2 Establecimiento de la vegetacioacuten con apoyo de estructuras artificiales (teacutecnicas combinadas)

El establecimiento espontaacuteneo de la vegetacioacuten en los taludes frecuentemente es muy difiacutecil cuando las condiciones ambientales son muy limitantes En estos casos es recomendable la utilizacioacuten de teacutec-nicas que realicen las funciones que la vegetacioacuten no puede hacer a corto y medio plazo a la vez que facilitan su establecimiento Estas intervenciones conjugan elementos vegetales con materiales inertes como madera acero galvanizado piedra u hormigoacuten

materiales que actuacutean como estabilizadores hasta que las plantas son capaces de realizar esta funcioacuten

Existen dos tipos de estructuras combinadas a) las estructuras de soporte que se destinan a estabilizar una masa de tierra muy inestable en profundidad (equiparables en teacuterminos geoteacutecnicos a muros de soporte) y b) las estructuras de cobertura y con-solidacioacuten destinadas a estabilizar las capas maacutes superficiales del suelo (hasta 30 cm) La presencia de especies lentildeosas en estas estructuras es de im-portancia capital ya que garantizan su eficacia a medio-largo plazo El desarrollo de la vegetacioacuten

Tierra de relleno

Rocas

Ramas y varas capaces de desarrolllar raiacuteces

Manta orgaacutenica(700-800 gm2)

10

050

-08

0 m

150-200 m

y especialmente el crecimiento de raiacuteces resistentes y profundas proporciona cohesioacuten y anclaje a las distintas capas de suelo haciendo innecesarias las estructuras inertes de soporte

a Entramados vivos

Estas estructuras se adaptan muy bien al soporte de pendientes y a la proteccioacuten y reconstruccioacuten de orillas fluviales muy degradadas Tambieacuten pue-den servir en obras transversales de disipacioacuten de energiacutea en cauces torrenciales de montantildea Su construccioacuten se hace con troncos de diaacutemetro de

entre 10 y 40 cm en capas alternas presentado normalmente una pendiente estructural de unos 5-10deg (Figura 12) Su estructura puede ser sencilla es decir con solo una pared longitudinal frontal (Figura 13) o doble con dos paredes longitudi-nales (Figura 12) Puede ser anclado con estacas o piquetas en medios muy inestables en profun-didad Posteriormente se rellena con tierra y en cada nivel se distribuyen ramas con capacidad vegetativa o plantas con raiacuteces de modo que lle-guen al suelo de la base Pueden incluir rellenos de piedra en la base o estar asociados a drenaje en las aplicaciones en pendientes

Figura 12 Entramado vivo doble combinado con un enrejado vivo y un drenaje para el soporte y consolidacioacuten de una pendiente (tomado de Martinho 2005)

Estaquillados vivos de arbustos autoacutectonos

Tronco horizontal superficialOslash = 12-20 cmL = 1-5 m

Tronco horizontal bajo tierraOslash = 12-20 cmL = 1-5 m

Tronco de fijacioacuten al sustratoOslash = 8-10 cmL = 1 m

Tronco verticalOslash = 12-20 cmL = 1-5 m

Anclaje

Tradicionalmente la fijacioacuten de los palos trans-versales se ha hecho con clavos Actualmente se recomienda el sistema de lsquojunta tipo banderarsquo con el fin de minimizar heridas en el lentildeo con el consiguiente riesgo de invasioacuten de patoacutegenos En funcioacuten del medio del tipo de aplicacioacuten y de la intensidad de los factores de tensioacuten a que

estaraacuten sujetas asiacute se distinguen los procedimien-tos constructivos

- Obras fluviales

En estas obras debido a la accioacuten erosiva hay que garantizar que las aacutereas abiertas esteacuten protegidas

Geodreno

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IacuteNDICE

contra la erosioacuten por filtros de piedras fajinas o geotextil de modo que se garantice la integridad estructural de la construccioacuten

bull Longitudinales (proteccioacuten o reconstruccioacuten de orillas) este tipo de intervenciones debido a la permanente accioacuten erosiva del agua tienen que ser cerradas en la parte frontal con piedras y faji-nas de modo que impidan la erosioacuten del material de relleno La disposicioacuten relativa de los palos transversales (superpuestos o alternados) no es criacutetica puesto que las tensiones son longitudina-les (el flujo del agua del riacuteo)

bull Transversales utilizados normalmente como estructuras de retencioacuten torrencial estos entra-mados son normalmente rellenados con piedra pudiendo sin embargo incluir vegetacioacuten lentildeosa que pueda aumentar el efecto de retencioacuten del flujo hiacutedrico Esta vegetacioacuten estaraacute compuesta por raiacuteces o ramas con capacidad vegetativa

- Obras de consolidacioacuten y soporte en pendientes

En estas obras en las que las tensiones son trans-versales la estructura es criacutetica Esta debe repartir estas fuerzas transversales de la forma maacutes homo-geacutenea por lo que es criacutetica en este caso la distri-bucioacuten alternada de los troncos Esto es importante no solamente cuando los entramados son utilizados como muros de soporte sino tambieacuten cuando son utilizados como elemento estructural de soporte de una carretera donde la correcta distribucioacuten de car-gas es criacutetica Como el principal factor erosivo es la lluvia no hay necesidad de instalar filtros entre los troncos siendo suficiente respetar el aacutengulo de es-tabilidad del material de relleno para que la estruc-tura quede estabilizada despueacutes de la construccioacuten hacia el inicio del desarrollo de la vegetacioacuten

- Otros tipos de entramados

En situaciones donde las tensiones y las masas del suelo que se pretende sujetar no exigen estructuras tan comple-jas y caras como los entramados dobles pueden utilizar-se entramados sencillos de una sola pared entramados tipo Roma o entramados modulares tipo Latina (Figura 13)

Figura 13 Entramado sencillo de una pared (A tomado de Florineth 2004) entramado tipo lsquoRomarsquo (Paolo Cornellini B) y entramado tipo lsquoLatinarsquo (Paolo Cornelini y Sauli 2005 C y D)

Estaquilla de aceroOslash 10-20 cm

100-150 m

30-50

200

-25

0 m

A

B

C D

b Gaviones revegetados con ramas vivas

Los gaviones son estructuras conformadas por una malla de alambre prefabricada que es rellenada con piedras Para revegetar estos gaviones se les puede aportar una capa de tierra feacutertil introduciendo des-pueacutes ramas vivas o plantas enraizadas de longitud superior a la anchura del gavioacuten de modo que se ga-rantice un buen desarrollo de las raiacuteces Al enraizar y crecer estas plantas ayudaraacuten a fijar las estructuras al talud daacutendole estabilidad mejorando su integracioacuten paisajiacutestica y garantizando una estabilizacioacuten esen-cialmente natural (Figura 14) Se utilizan en la defensa longitudinal de orillas o para soporte y consolidacioacuten de taludes con pendientes muy elevadas o inestables

c Tierra armada (geotextiles reforzados con lechos de ramaje)

Para armar esta estructura se utilizan mallas de geo-textil que pueden estar reforzadas con mallas de ace-ro rellenadas con unos 50 cm de tierra vegetal Una vez construida la estructura se procede a la plantacioacuten de especies lentildeosas o a la instalacioacuten de un lecho de ramaje que mejoraraacuten la estabilidad de toda la es-tructura y aumentaraacuten la integracioacuten paisajiacutestica Se utiliza este tipo de intervenciones en la estabilizacioacuten

Figura 14 Gaviones revegetados esquema de su estructura (Florineth 2004) y procedimiento de construccioacuten

Estaquillas

Piedras dispuestas manualmente

10-15 cm

100 m

100

m

de taludes de pendiente media-alta en zonas de ribera o en la construccioacuten de muros de proteccioacuten sonora

d Enrejado vivo

Los enrejados vivos son estructuras de madera de consolidacioacuten superficial de taludes con una altura de unos 20 m y pendientes de 30deg aproximadamen-te Se destinan a consolidar las capas superiores de la pendiente hasta una profundidad de 30-40 cm (en funcioacuten del tipo de entramado) Se construyen

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IacuteNDICE

utilizando troncos de diaacutemetros entre 10 y 30 cm en una estructura enrejada sencilla o doble (Figura 12) La distancia vertical entre los distintos niveles trans-versales es funcioacuten del aacutengulo de estabilidad del sue-lo y debe garantizar la ausencia de movimientos de suelo La introduccioacuten de la vegetacioacuten puede hacerse por plantacioacuten o estaquillado y puede ser posterior a la construccioacuten del enrejado Eso significa que es posible construir el enrejado fuera del periacuteodo vege-tativo a diferencia de lo que ocurre en la mayoriacutea de sistemas descritos

e Peldantildeos de lentildea

Esta es una teacutecnica sencilla de consolidacioacuten superfi-cial de suelos erosionados y de reduccioacuten de la energiacutea de la escorrentiacutea por reduccioacuten de la trayectoria lineal del agua a lo largo de la ladera Simultaacuteneamente constituyen un soporte magnifico para la instalacioacuten de vegetacioacuten por la acumulacioacuten de partiacuteculas finas y por la reduccioacuten de la erosividad en estos peldantildeos Su construccioacuten se hace clavando estacas a lo largo de la ladera por detraacutes de las cuales se disponen horizontal-mente uno o dos troncos Detraacutes de estos se pueden construir lechos de ramaje o realizar plantaciones de lentildeosas Facilitan tambieacuten el eacutexito de siembras entre las liacuteneas de peldantildeos al reducir la energiacutea de la esco-rrentiacutea y la consecuente erosioacuten

3 Teacutecnicas complementarias

Junto con las teacutecnicas constructivas propiamente dichas se puede emplear otras teacutecnicas que terminen y comple-menten las anteriores pero que no cumplan un objetivo de estabilizacioacuten o de proteccioacuten contra la erosioacuten Es el caso de la plantacioacuten de especies lentildeosas con el obje-tivo de acelerar el desarrollo de la sucesioacuten la creacioacuten de pantallas sonoras los drenajes etc Este conjunto de teacutecnicas se detallan en el Capiacutetulo 5 de este manual

VI OTRAS TEacuteCNICAS

No es el propoacutesito de este capiacutetulo discutir teacutecnicas que no tengan como objetivo final el reestablecimiento de una cubierta vegetal lo maacutes parecida a la original po-sible Sin embargo creemos importante que el lector sepa de la existencia de otras posibles medidas (no eco-tecnoloacutegicas) que pueden servir para aumentar la inte-gracioacuten paisajiacutestica en zonas donde es completamente imposible cualquier otro tipo de restauracioacuten ambiental El mejor ejemplo de esto son los productos de envejeci-miento para disimular taludes yo canteras de roca viva que no son colonizables por la vegetacioacuten Esta teacutecnica no forma parte de la restauracioacuten ecoloacutegica pero pue-de ser uacutetil en ocasiones concretas (pe en canteras de maacutermol donde la colonizacioacuten vegetal es enormemente difiacutecil en las paredes resultantes)

iquestNecesitamos realmente aplicar medidas ecotecnoloacutegicas

Depende del caso Sobre todo tenemos que fijarnos en la gravedad de los efectos de la obra sobre los distintos procesos ecoloacutegicos y en si estos se pue-den reestablecer de forma natural o no Tambieacuten son importantes las constricciones a las que nos pueden llevar los plazos de las diferentes administraciones

iquestQueacute procesos ecoloacutegicos estaacuten dantildeados

Es fundamental estudiar en detalle cuaacuteles son los pro-cesos ecoloacutegicos que se han dantildeado Por ejemplo si no tenemos preocupacioacuten acerca de las limitaciones a la dispersioacuten de las semillas de las especies vegetales de intereacutes no tiene sentido plantearse siembras

iquestQueacute materiales son faacuteciles de conseguir y cercanos

Para las semillas las plantas las fuentes de carbono las enmiendas orgaacutenicas y los distintos materiales

vegetales que se describen en este capiacutetulo debe-remos dar preferencia a los que son originarios de la zona y por tanto potencialmente maacutes adaptados a las condiciones locales

iquestCuaacutel es la medida maacutes adecuada para mi sitio concreto (pendiente tipo de suelo climahellip)

Esta es otra de las preguntas clave que tiene difiacutecil res-puesta En este capiacutetulo tratamos de enfatizar que no se deben copiar lsquorecetasrsquo directamente de proyectos de zonas con climas distintos sin la previa evaluacioacuten criacutetica de sus limitaciones en nuestra zona Tenemos que tener muy claras las teacutecnicas disponibles y cuaacutel es la maacutes barata eficaz y menos dantildeina de todas las posibles para nuestro caso concreto La breve des-cripcioacuten dada en este capiacutetulo y las fuentes de infor-macioacuten recomendadas ayudaraacuten al lector a decidir En este capiacutetulo ofrecemos un aacuterbol de decisiones (Figura 1) y una tabla-resumen sobre todas las teacutecnicas men-cionadas en este capiacutetulo los procesos que ayudan a reestablecer y su coste (Tabla 6) que esperemos que faciliten al lector la toma de esta difiacutecil decisioacuten

VII PREGUNTAS CLAVE

Tabla 6 Resumen de las teacutecnicas detalladas en este capiacutetulo los procesos que sirven para reestablecer las situaciones en las que son maacutes recomendables y una estima cualitativa de su coste

TEacuteCNICA CONTROL DE EROSIOacuteN

FERTILIDAD ESTABILIDAD INTRODUCCIOacuteN DE PLANTAS

DRENAJE SE RECOMIENDA EN

COSTE

lt02 M gt02 M

Mallas o enrejados metaacutelicos

Taludes con pendientes elevadas de roca fracturada o granulometriacutea gruesa

Medio

Geomallas volumeacutetricas

Taludes de pendientes elevadas (gt40ordm) con suelos pobres de desmonte mejora la retencioacuten de finos

Medio

Geoceldas

Canalizaciones y encauzamientos de barranco aplicar junto con hidrosiembra NO en taludes de pendiente 30ordm ni desmontes

Medio

Mantas orgaacutenicas

Control de erosioacuten laminar rellenado de regueros cunetas y caacutercavas revestimiento de muros soporte de trepadoras Frenan elementos finos Usar con fajinas o biorrollos o con mallas sinteacuteticas de gran duracioacuten

Mediobajo

Mallas o redes orgaacutenicas yo sinteacuteticas

Taludes verticales Utilizar junto con geotextiles Frena la erosioacuten por caacutercavas

Medio

Muros de pie

Reduce la erosioacuten en taludes muy verticales utilizar junto con geotextiles o mantas orgaacutenicas

Alto

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IacuteNDICE

TEacuteCNICA CONTROL DE EROSIOacuteN

FERTILIDAD ESTABILIDAD INTRODUCCIOacuteN DE PLANTAS

DRENAJE SE RECOMIENDA EN

COSTE

lt02 M gt02 M

Fajinas o fajinados

Restauracioacuten de caacutercavas riberas o lugares huacutemedos (fajinas vivas) Frenan la erosioacuten en taludes no muy verticales (gt35ordm) Conviene aplicar con teacutecnicas a maacutes corto plazo (mantas orgaacutenicas hidrosiembras entramados de ramas)

Bajo

Lechos y entramados de ramas y colchones de vegetacioacuten

Aplicable sobre todo en lechos de riacuteos Tambieacuten para formar islas o como fitodepuradoras

Bajo

Encachados

Evitar socavamiento o arrastre de estructuras en lechos de riacuteo

Alto

Fertilizacioacuten inorgaacutenica

Aumenta fertilidad del suelo es maacutes recomendable la orgaacutenica si el material disponible es bueno

Bajo

Fertilizacioacuten orgaacutenica

Aumenta la materia orgaacutenica del suelo reduce la erosioacuten y mejora el establecimiento vegetal

Bajo

Fertilizacioacuten con carbono

Taludes con elevada fertilidad y donde hemos detectado presencia de especies muy dominantes o catalogadas como invasoras

Depende de la cercaniacutea de fuentes de carbono

Tabla 6 Resumen de las teacutecnicas detalladas en este capiacutetulo los procesos que sirven para reestablecer las situaciones en las que son maacutes recomendables y una estima cualitativa de su coste (Continuacioacuten)

TEacuteCNICA CONTROL DE EROSIOacuteN

FERTILIDAD ESTABILIDAD INTRODUCCIOacuteN DE PLANTAS

DRENAJE SE RECOMIENDA EN

COSTE

lt02 M gt02 M

Hidrosiembras

Taludes de difiacutecil acceso o con elevado riesgo de erosioacuten Utilizar conjuntamente con teacutecnicas que aumenten la fertilidad del suelo Veacutease Capiacutetulo 5 de este manual

Medio

Estaquillado

Lugares con alta disponibilidad hiacutedrica Muy recomendado para pequentildeos deslizamientos debidos al exceso de humedad del suelo o como fijacioacuten de geotextiles o mantas orgaacutenicas Revegetacioacuten de escolleras

Bajo

Empalizada trenzada viva

Proteccioacuten de orillas (velocidad maacutexima de 15-35 ms si supera esto mejor estera de ramaje) Estructuracioacuten de taludes (siempre y cuando haya bastante humedad edaacutefica

Alto

Estera de ramaje

Para lugares con riesgo fluvial muy elevado

Alto

Entramados vivos

Orillas de riacuteo muy degradadas consolidacioacuten de pendientes en sitios huacutemedos

Medio

Tabla 6 Resumen de las teacutecnicas detalladas en este capiacutetulo los procesos que sirven para reestablecer las situaciones en las que son maacutes recomendables y una estima cualitativa de su coste (Continuacioacuten)

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IacuteNDICE

TEacuteCNICA CONTROL DE EROSIOacuteN

FERTILIDAD ESTABILIDAD INTRODUCCIOacuteN DE PLANTAS

DRENAJE SE RECOMIENDA EN

COSTE

lt02 M gt02 M

Gaviones revegetados con ramas vivas

En proteccioacuten de orillas o para soporte y consolidacioacuten de taludes con pendientes muy elevadas o inestables

Medio

Tierra armada

Taludes de pendiente media-alta en zonas de ribera o en la construccioacuten de muros de proteccioacuten sonora

Alto

Enrejado vivo

Consolidacioacuten superficial de taludes con una altura de hacia 20 m y pendientes de lt30ordm

Alto

Peldantildeos de lentildea

Consolidacioacuten superficial de suelos erosionados y de reduccioacuten de la energiacutea de la escorrentiacutea

Bajo

Tabla 6 Resumen de las teacutecnicas detalladas en este capiacutetulo los procesos que sirven para reestablecer las situaciones en las que son maacutes recomendables y una estima cualitativa de su coste (Continuacioacuten)

iquestDoacutende

Autoviacutea A-30 en su variante de Molina del Segura Murcia (Figura 15)

iquestQueacute se hizo

Con el objetivo de evaluar la efectividad de las mantas orgaacutenicas en clima mediterraacuteneo se reali-zoacute un experimento para cuantificar la cantidad de soacutelidos arrastrados y niveles de supervivencia de plaacutentulas sobre taludes en terrapleacuten Para ello se aplicaron mantas orgaacutenicas a base de esparto y coco comprobando los niveles de erosioacuten del sue-lo y el crecimiento de los plantones introducidos La eficacia del tratamiento se valoroacute comparaacutendo-lo con un control con plantacioacuten e hidrosiembra pero sin ninguacuten tipo de manta orgaacutenica (Contreras y Navarro-Quercop 1996 para maacutes detalles)

iquestQue ocurrioacute

Las mantas orgaacutenicas fueron mucho maacutes eficaces que el control (Figura 16) Las peacuterdidas de suelo

en las parcelas protegidas con manta de esparto y de fibra de coco oscilaron entre 2 y 5 Tmha y antildeo mientras que en la parcela control el maacuteximo de peacuterdida fue de 148 Tmha y antildeo Ademaacutes de reducir la peacuterdida de suelo sobre todo la de la fraccioacuten de granulometriacutea maacutes gruesa las mantas orgaacutenicas tambieacuten incrementaron el desarrollo general de la plantacioacuten Las zonas sin las mantas mostraron un riesgo evidente de descalce y desaparicioacuten de las plantas por efecto de la peacuterdida de suelo

En la restauracioacuten de infraestructuras lineales con frecuencia aparecen problemas derivados de la au-sencia de una correcta evaluacioacuten de alternativas Cuando nos enfrentamos a la restauracioacuten ecoloacutegi-ca de infraestructuras lineales (o cualquier otro tipo de restauracioacuten) la primera alternativa que debe-mos barajar es no actuar dejando que los procesos naturales sigan su curso Alternativamente se pue-de corregir los procesos naturales necesarios para que la restauracioacuten ocurra de forma natural Solo si las anteriores alternativas no ofrecen garantiacuteas de eacutexito se debe acudir a la aplicacioacuten de las medidas de menor impacto y coste que permitan que estos procesos se reactiven Si se estima que ninguna de estas opciones permitiriacutea alcanzar los objetivos de la restauracioacuten se debe aplicar teacutecnicas de mayor impacto que sustituyan de forma temporal los pro-cesos ecoloacutegicos interrumpidos Normalmente las teacutecnicas ecotecnoloacutegicas deberiacutean ser aplicables soacutelo cuando la primera y la segunda alternativas

no son a priori viables Seraacute el gestor de la obra quien tenga que decidir las medidas maacutes indicadas para cada situacioacuten Ademaacutes de los condicionantes puramente ecoloacutegicos esta decisioacuten dependeraacute del riesgo inminente de erosioacuten y de la presioacuten social y poliacutetica para conseguir una integracioacuten paisajiacutesti-ca en el menor tiempo posible La Figura 1 muestra las alternativas principales que deben considerarse en cada situacioacuten Maacutes adelante en este capiacutetulo se ofrece maacutes informacioacuten sobre cada una ellas y sobre las limitaciones que plantean

Otro gran problema indirectamente asociado a la aplicacioacuten de estas teacutecnicas es la forma y espe-cialmente el periacuteodo de ejecucioacuten Ademaacutes del fracaso de la intervencioacuten que conlleva una ejecu-cioacuten deficiente el mal uso de estas teacutecnicas supo-ne con frecuencia un encarecimiento del proyecto de restauracioacuten A lo largo de este texto aporta-mos diversos ejemplos de estas deficiencias

VIII ERRORES HABITUALES

IX UN EJEMPLO DE EacuteXITO

Figura 15 Vista del talud del ejemplo

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IacuteNDICE

X UN EJEMPLO DE FRACASO

iquestDoacutende

El grupo de trabajo de Ecologiacutea y Fisiologiacutea de Plantas Mediterraacuteneas del Centro de Ciencias Medioambientales del CSIC durante los antildeos 2000-2005 llevoacute a cabo un proceso de seguimien-to y mejora de las actuaciones de revegetacioacuten e hidrosiembra realizadas en dos tramos de la Au-topista de la Costa del Sol (Maacutelaga y Caacutediz) La zona presenta una temperatura media de 185 degC y un reacutegimen de precipitacioacuten de 873 mm anuales Las formaciones litoloacutegicas maacutes importantes estaacuten dominadas por areniscas y afloramientos calizos ocasionales

iquestQueacute se hizo

Los taludes fueron hidrosembrados con una mez-cla comercial de semillas (mayoritariamente le-guminosas y gramiacuteneas) y componentes para es-tabilizar y fertilizar el suelo (veacutease Tabla 1) La densidad de la mezcla aplicada fue de 35 gm-2 La hidrosiembra se realizoacute en dos pasadas la pri-mera con todos los ingredientes y la segunda solo con los estabilizantes y el mulch habitual

iquestQue ocurrioacute

Mientras que en los terraplenes se halloacute una cober-tura vegetal media de casi el 80 en los desmontes

fue del 20 La riqueza floriacutestica tambieacuten fue ma-yor en los terraplenes La comparacioacuten de terraple-nes hidrosembrados con aquellos que no lo fueron reveloacute escasas diferencias en la cobertura biomasa y riqueza de especies La hidrosiembra no obtuvo mejores resultados que la propia colonizacioacuten na-tural en estas condiciones favorables

iquestPor queacute ocurrioacute y como solucionarlo

1) Una de las principales causas es que la hidro-siembra se hizo fuera de la eacutepoca recomendable Hay que tener en cuenta el tipo de clima el tipo de talud (en desmontes seraacute siempre maacutes difiacutecil que funcione esta teacutecnica) la pendiente y las ca-racteriacutesticas del suelo Tambieacuten la existencia de vegetacioacuten proacutexima que ayude a la propagacioacuten de especies cercanas Cuando estos factores son los adecuados la hidrosiembra deberiacutea ser recon-siderada y en ciertos casos suspendida

2) Las difiacuteciles condiciones de los desmontes limitan la colonizacioacuten de la vegetacioacuten de ahiacute su escasa cobertura vegetal En general se recomienda mejo-rar la fertilidad del suelo y reducir la pendiente con la tierra vegetal o mediante otras medidas ecotecnoacute-logicas antes de hidrosembrar La parte superior de los desmontes suelen tener una banda que frecuen-temente estaacute colonizada por vegetacioacuten natural a partir de la cual se produce la colonizacioacuten del talud por lo que se recomienda conservarla y promoverla

Figura 16 Resultados de la peacuterdida de sedimentos bajo los distintos tratamientos ensayados (manta de esparto manta de coco y control)

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Al contrario que el caso anterior la revegetacioacuten de un tramo de la A-92 correspondiente a la zona de Veacutelez Rubio (Almeriacutea) ejecutada por Ferrovial consiguioacute una elevada cobertura vegetal En este caso las principales diferencias fueron hidrosem-brar en otontildeo que es el periacuteodo maacutes adecuado

en esa zona e incrementar previamente la fertili-dad del suelo mediante la aplicacioacuten de estieacutercol El incremento previo de la fertilidad del suelo ha aumentado notablemente el rendimiento de esta teacutecnica en otros lugares como por ejemplo en un tramo de la Nndash4 cercano a Baileacuten

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CAPIacuteTULO 8 Actuaciones para minimizar los efectos sobre la fauna

Juan E Malo y Cristina Mata

I ALCANCE Y CONTENIDOS

La restauracioacuten ecoloacutegica asociada a cualquier ac-tividad humana debe atender no solo a recuperar los aspectos visuales y esteacuteticos de los sistemas naturales alterados sino tambieacuten a los aspectos funcionales de los mismos en los que desempentildea un papel importante la fauna Puede decirse que la conciencia ambiental de la sociedad va evolu-cionando y que a raiacutez de ella se desarrolla una legislacioacuten progresivamente maacutes estricta legisla-cioacuten que condiciona de forma creciente la puesta en marcha de nuevos proyectos Asiacute hace tres deacute-cadas la atencioacuten a los aspectos paisajiacutesticos re-sultaba pionera en nuestra legislacioacuten (veacutease el RD 29941982 de Restauracioacuten de espacios naturales afectados por actividades extractivas) pero hoy en diacutea el espiacuteritu y la letra de nuestras leyes ambien-tales trascienden estos aspectos para abordar la conservacioacuten integral de la naturaleza Como con-secuencia de estas leyes de una mayor conciencia ambiental y del desarrollo teacutecnico en la actuali-dad se presta gran atencioacuten a la minimizacioacuten de los efectos que tienen las infraestructuras sobre la integridad de los ecosistemas Dentro de este marco el alcance del presente capiacutetulo comprende el conjunto de actuaciones aplicadas en carreteras y ferrocarriles para minimizar los efectos sobre la fauna atendiendo al nivel de conocimiento teacutecnico actual (y su aplicacioacuten) y con una atencioacuten priori-taria al mantenimiento de la funcionalidad de los haacutebitats fragmentados durante la fase de funciona-miento del proyecto Esta concrecioacuten de objetivos

que deja de lado medidas correctoras aplicadas en el aacuterea de afeccioacuten directa del proyecto durante la fase de construccioacuten se justifica tanto por las in-evitables limitaciones existentes para la realizacioacuten de este capiacutetulo como por el hecho de que las escalas espaciales y temporales de mayor preocu-pacioacuten para la restauracioacuten de la fauna son precisa-mente la mayor amplitud espacial (todo el entorno del proyecto) y temporal (las deacutecadas en que estaraacute operativa la infraestructura)

La reduccioacuten de los efectos negativos derivados de las carreteras y ferrocarriles sobre la fauna se aborda en el disentildeo y desarrollo de todos los proyectos y los procedimientos de evaluacioacuten de impacto am-biental prestan una atencioacuten destacada a este pun-to No obstante debe destacarse desde el principio la existencia de un sesgo notorio hacia los vertebra-dos terrestres en el disentildeo y aplicacioacuten de actua-ciones de restauracioacuten La falta de conocimientos baacutesicos y maacutes auacuten la praacutectica habitual en ecologiacutea aplicada nos lleva a plantear la inevitable restriccioacuten taxonoacutemica de la informacioacuten que se va a mostrar Si bien los vertebrados terrestres pueden en cier-tas situaciones ejercer como indicadores para otros grupos taxonoacutemicos o hacer de especies paraguas de ellos faltariacuteamos a la realidad si pretendieacutese-mos decir (como se ha hecho con alguna frecuen-cia) que la atencioacuten a los vertebrados es suficiente para asegurar una adecuada evaluacioacuten de impactos (o restauracioacuten) del conjunto de las comunidades animales Por tanto reconociendo la existencia de un amplio campo de mejora futura este capiacutetulo se centra en actuaciones enfocadas a la minimizacioacuten de los efectos de las infraestructuras de transporte sobre los vertebrados

La minimizacioacuten de los efectos sobre la fauna debe atender a las fases de construccioacuten y explotacioacuten de las viacuteas de transporte con evidentes diferencias en su perspectiva temporal Asiacute la fase de cons-truccioacuten de un tramo de carretera o ferrocarril suele durar varios antildeos en los que los impactos puntua-les son de gran intensidad Las medidas correctoras ejecutadas en ella suelen centrarse en la proteccioacuten de haacutebitats o localizaciones concretas formando parte del conjunto de acciones comunes para la proteccioacuten del entorno del proyecto y con reper-cusiones sobre variados factores ambientales Este tipo de actuaciones son de aplicacioacuten frecuente a todo tipo de proyectos y en el caso de las infra-estructuras de transporte su efectividad estaacute muy mediada por el estudio detallado del territorio y la seleccioacuten de alternativas previa a la ejecucioacuten del proyecto En contraposicioacuten con la construccioacuten la

fase de operacioacuten de una viacutea de transporte es mu-cho maacutes larga ya que la mayoriacutea de ellas se pro-yecta con una vocacioacuten de permanencia indefinida Por este motivo cada vez maacutes se atiende a mini-mizar los efectos del proyecto con actuaciones de restauracioacuten enfocadas a mantener la funcionalidad natural del aacuterea a largo plazo Sobre este tipo de medida se centran los proacuteximos apartados dado que su disentildeo y peculiaridades de aplicacioacuten son claramente diferenciadas y propias para la fauna frente a actuaciones maacutes geneacutericas de adecuacioacuten ambiental de las obras como las habitualmente de-sarrolladas durante la construccioacuten de las infraes-tructuras

Por uacuteltimo y con el mismo aacutenimo de enfocarse hacia las actuaciones de disentildeo y aplicacioacuten maacutes comuacuten para la proteccioacuten de la fauna el presente capiacutetulo no trata las medidas tomadas en el entorno adya-cente a la viacutea Si bien las labores de restauracioacuten tra-tadas mayoritariamente en el resto de capiacutetulos de este libro se circunscriben a estas zonas fuertemen-te impactadas durante la fase de obra el objetivo de conservacioacuten de la fauna de un aacuterea atravesada por una carretera o ferrocarril debe enfocarse prin-cipalmente hacia un entorno maacutes distante tratando de asegurar el mantenimiento de las comunidades animales existentes en eacutel

Con estas restricciones en mente los principales objetivos del capiacutetulo se centran en sintetizar el conocimiento maacutes relevante sobre los efectos de las infraestructuras de transporte sobre la fauna y las medidas correctoras propuestas y ensayadas en las uacuteltimas deacutecadas para reducirlos Desde el punto de vista de las propuestas de actuacioacuten se compila y presenta la tipologiacutea de medidas exis-tente acompantildeada de las indicaciones teacutecnicas maacutes relevantes Para terminar se realiza una eva-luacioacuten general de las experiencias acumuladas en este aacutembito de trabajo sentildealando los aspectos positivos y negativos maacutes importantes derivados de la aplicacioacuten de estas actuaciones asiacute como las perspectivas de investigacioacuten actuales En la medida de lo posible en el texto se han incluido referencias a casos desarrollados en la Peniacutensula Ibeacuterica que pueden ser de maacutes faacutecil aplicacioacuten por el lector o en su defecto las maacutes recientes o relevantes procedentes de otras partes del mun-do Aparte de las referencias presentes al final del capiacutetulo el lector dispone del apartado de lsquoBi-bliografiacutea baacutesica y enlacesrsquo al final del libro en el que aparecen las principales fuentes documen-tales para el disentildeo y aplicacioacuten de este tipo de actuaciones

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Las infraestructuras lineales generan de modo direc-to e indirecto los cinco tipos de efectos reconocidos como principales amenazas para la conservacioacuten de la biodiversidad peacuterdida y degradacioacuten de haacutebitats frag-mentacioacuten de poblaciones mortalidad de individuos e introduccioacuten de especies (Meffe y Carroll 1997 Forman y Alexander 1998 Forman et al 2003 Coffin 2007) Estos efectos adquieren distinta relevancia entre siacute y en las distintas fases de vida de las infraestructuras de transporte y han recibido una atencioacuten dispar tanto en la investigacioacuten como en la propuesta de medidas destinadas a la restauracioacuten de las aacutereas afectadas por la construccioacuten de carreteras y ferrocarriles

El efecto maacutes inmediato derivado de la construccioacuten de cualquier infraestructura viaria es la peacuterdida de haacutebitats que conlleva un inevitable descenso en la capacidad de carga del sistema y por tanto del tamantildeo de las po-blaciones ligadas a estos enclaves (Lodeacute 2000 Fahrig 2002) Pese a la reducida anchura de la plataforma de las infraestructuras (14 m en liacuteneas de alta velocidad y aproximadamente 25 m en autoviacuteas) su gran longitud lleva a que el aacuterea total finalmente ocupada sea muy grande Ademaacutes durante el proceso de construccioacuten es necesario acondicionar para el trabajo un aacuterea mucho maacutes amplia y en todo caso resulta necesario antildeadir las superficies que inevitablemente se transforman en des-montes y terraplenes como consecuencia directa de la interseccioacuten del perfil de la traza con el terreno natural Por este motivo es frecuente asumir que la elimina-cioacuten de haacutebitats como consecuencia de la construccioacuten de una carretera se aproxima a los 100 m de anchura (Forman y Deblinger 2000) Dado que el entorno afec-tado directamente por las obras pero no ocupado por la infraestructura y sus elementos accesorios se puede recuperar de forma maacutes o menos completa tras su fina-lizacioacuten este tipo de efectos se asocia de modo priori-tario a la fase de construccioacuten pero resulta permanente al menos en el aacuterea de ocupacioacuten directa de la carretera o la liacutenea feacuterrea

En segundo lugar se produce una degradacioacuten de haacutebitats derivada de una serie de perturbaciones (cambios en las condiciones que determinan los pa-raacutemetros vitales de las especies) ligadas a la activi-dad humana y la intensidad del traacutefico Entre aque-llas resultan especialmente destacables el ruido las emisiones de gases la contaminacioacuten lumiacutenica el aumento de los niveles de contaminantes en el sue-lo y el aumento de la accesibilidad humana al terri-torio (veacuteanse las revisiones de Forman y Alexander 1998 Forman et al 2003 y Coffin 2007) La distancia

de afeccioacuten dependeraacute del tipo de viacutea la intensidad de traacutefico y la especie en cuestioacuten pudiendo variar en la mayoriacutea de los casos entre 100 y 500 m si bien para especies maacutes sensibles se han descrito efectos a maacutes de 1000 m (Forman y Deblinger 2000 Nelle-mann et al 2003 Jaeger et al 2005) En su conjunto este tipo de efectos multiplica el aacuterea de afeccioacuten de las infraestructuras y se refleja en una disminucioacuten auacuten mayor del aacuterea efectivamente utilizable por las especies poco tolerantes a la perturbacioacuten humana yo una reduccioacuten de la densidad en el entorno de la infraestructura Como contrapartida se debe in-dicar que las especies maacutes tolerantes a la actividad humana pueden verse beneficiadas en esta aacuterea ya sea de forma directa por la existencia de recursos (pe especies carrontildeeras) como por efectos indi-rectos mediados por la disminucioacuten de las especies menos tolerantes (sean estas competidoras o de-predadoras) Como resultado las infraestructuras ejercen de corredores para las especies antropoacutefilas La degradacioacuten del entorno ocurre tanto durante la construccioacuten como en la explotacioacuten del proyecto y aunque los efectos sean maacutes agudos en la fase de construccioacuten debe tenerse en cuenta que los efec-tos croacutenicos del funcionamiento de la infraestructura se extenderaacuten durante toda su vida uacutetil

El tercer grupo de efectos se asocia a la fragmen-tacioacuten de los haacutebitats disectados por la viacutea enten-diendo aquella como la subdivisioacuten en fragmentos de menor tamantildeo y con ciertas dificultades de conexioacuten entre siacute (Bascompteacute y Soleacute 1996) La fragmentacioacuten de haacutebitats conlleva la de aquellas poblaciones asen-tadas en ellos lo que se refleja en poblaciones de menor tamantildeo y relativamente desconectadas entre siacute (Haila 2002 Mcgarigal y Cushman 2002) Resulta con-veniente indicar que la fragmentacioacuten se caracteriza y distingue de la destruccioacuten y degradacioacuten de haacutebitats por los dos efectos particulares recieacuten mencionados el menor tamantildeo de las poblaciones sustentadas en cada tesela de haacutebitat aumenta su probabilidad de extincioacuten local (por efecto del azar) y la disminucioacuten de la conectividad conlleva la disminucioacuten de la pro-babilidad de recolonizacioacuten desde aacutereas proacuteximas junto con la posible aparicioacuten de efectos geneacuteticos negativos para la supervivencia de la poblacioacuten Aun-que se ha debatido acerca de la relevancia de la frag-mentacioacuten y hasta queacute punto se debe favorecer la co-nectividad en la actualidad existe el consenso de que la fragmentacioacuten puede ser incluso maacutes perjudicial para la salud del ecosistema atravesado por una in-fraestructura que la propia destruccioacuten y degradacioacuten

de haacutebitats (Robinson et al 1992 Lindenmayer et al 1999 Fahrig 2003)

El cuarto grupo de efectos tambieacuten vinculados a la fase de explotacioacuten deriva de un inevitable incremen-to de la mortalidad por atropello de la fauna silvestre Las carreteras o ferrocarriles pueden actuar como un sumidero para las poblaciones proacuteximas a la infraes-tructura pudiendo llegar a constituir una seria amena-za para especies de poblaciones reducidas y con bajas tasas de reproduccioacuten (Ferreras et al 1992 Forman y Alexander 1998) Este tema ha suscitado gran aten-cioacuten mediaacutetica y cientiacutefica tanto por la fuerza visual y emocional de la presencia de animales atropellados en las carreteras como por las implicaciones econoacute-micas y sociales que tiene (Romin y Bissonette 1996 Malo et al 2004) Este problema empieza a preocupar tambieacuten para el caso de los trenes de alta velocidad habieacutendose publicado recientemente una monografiacutea sobre el particular (Rodriacuteguez et al 2008)

Por uacuteltimo la construccioacuten de infraestructuras facili-ta la expansioacuten de especies invasoras a lo largo de ellas ya que se ven favorecidas por el haacutebitat alte-rado presente en el entorno de la viacutea Aunque desde la biologiacutea de la conservacioacuten se acostumbra a dar un tratamiento especiacutefico a este problema concep-tualmente se podriacutea englobar como un subtipo de degradacioacuten de haacutebitat con la salvedad de que las especies favorecidas en este caso no se encontraban presentes en el ecosistema con anterioridad La gra-vedad de los efectos que aparecen frecuentemente vinculados a las especies exoacuteticas puede justificar su tratamiento independiente pero parece adecua-do no profundizar aquiacute en esta discusioacuten (de valor meramente acadeacutemico) y siacute remarcar que el efecto corredor para las especies invasoras de las infraes-tructuras lineales se ha descrito en algunas ocasio-nes (Pauchard y Alaback 2004 Barbosa et al 2010)

1 Revisioacuten del conocimiento existente y de las praacutecticas de restauracioacuten desarrolladas

Los muacuteltiples efectos derivados de la construccioacuten y posterior explotacioacuten de las infraestructuras lineales de transporte son una constante preocupacioacuten que des-de el campo de la biologiacutea de la conservacioacuten se ha conseguido trasladar al campo teacutecnico y de toma de decisiones lo que ha conducido a la elaboracioacuten de numerosos documentos teacutecnicos En el contexto espa-ntildeol la primera Guiacutea metodoloacutegica para la elaboracioacuten de Estudios de Impacto Ambiental (Suaacuterez 1989) supuso todo un hito en este aacutembito recogiendo las primeras propuestas para minimizar los impactos de ferrocarriles

II EFECTOS DE LAS INFRAESTRUCTURAS SOBRE LOS VERTEBRADOS y carreteras Posteriormente en la deacutecada de los noven-ta con la incorporacioacuten de medidas correctoras en los nuevos proyectos de infraestructuras se siguioacute avan-zando en el estudio de los impactos generados por estas y se elaboraron dos guiacuteas en las que se recogiacutean un amplio abanico de medidas correctoras destinadas a minimizar estos impactos (Velasco et al 1995 Rosell y Velasco 1999) En la misma liacutenea se han continuado publicando guiacuteas praacutecticas destinadas a mejorar el di-sentildeo de estas medidas como la desarrollada a escala europea por Iuell et al (2005) fruto de la Accioacuten COST 341 A escala nacional destacan las lsquoPrescripciones teacutecnicasrsquo para el disentildeo de pasos de fauna y vallados perimetrales elaboradas por el Ministerio de Medio Am-biente (2006) asiacute como la monografiacutea sobre pasos de fauna publicada por el CEDEX en la que se combinan resultados derivados del seguimiento de estas medidas con indicaciones de disentildeo (Hervaacutes et al 2006)

Sobre la base de estos documentos y con atencioacuten prioritaria a las indicaciones teacutecnicas maacutes modernas y contrastadas a continuacioacuten se presenta una reco-pilacioacuten de las principales actuaciones desarrolladas para evitar la fragmentacioacuten de poblaciones por las infraestructuras lineales En dicha recapitulacioacuten se presentan ademaacutes las recomendaciones teacutecnicas maacutes relevantes en cuanto a disentildeo y puesta en marcha

En liacuteneas generales y de forma muy simplificada se puede realizar una primera clasificacioacuten de estas me-didas correctoras distinguiendo dos tipologiacuteas baacutesicas a) en funcioacuten de su ubicacioacuten respecto a la viacutea (inferior frente a superior) y b) dependiendo del disentildeo (exclu-sivo para la fauna frente a mixto con uso humano) No obstante la diferenciacioacuten de tipos es mucho maacutes pro-lija tal y como se detalla a continuacioacuten Mencioacuten apar-te requieren los cerramientos perimetrales que ejercen una funcioacuten complementaria y a su vez imprescindible para el correcto funcionamiento de estos pasos

Figura 1 Cabras montesas (Capra pyrenaica subsp hispanica) paci-endo en los bordes de la carretera A-92 Sierra Nevada (Granada)

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III TIPOLOGIacuteA DE LAS MEDIDAS CORRECTORAS

1 Cerramiento perimetral

El cerramiento perimetral (vallado) de las infraestruc-turas es en la actualidad obligatorio para todas las liacuteneas feacuterreas (nuevas o antiguas habilitadas para velocidades superiores a 160 kmh) las viacuteas de alta capacidad (autoviacuteas y autopistas) y algunas carrete-ras convencionales (pe en entornos urbanos) y se realiza puntualmente en otras carreteras convencio-nales El principal objetivo del vallado es impedir la presencia de personas o animales de gran tamantildeo (ganado principalmente) en la viacutea que suponen un grave riesgo para los vehiacuteculos y sus ocupantes en caso de colisioacuten Por este motivo el vallado tradicio-nal soliacutea consistir en una malla de luz relativamente amplia y aproximadamente de 15 m de altura

Debido al incremento de las poblaciones de ungu-lados silvestres y en un intento de reducir el nuacute-mero de atropellos de animales de menor tamantildeo los vallados actuales son maacutes altos resistentes e impermeables a la fauna silvestre Las principales recomendaciones en este sentido se concretan en

bull La altura debe ser superior a 18 m y en caso de existir poblaciones de ciervo en el entor-no elevarse hasta los 2 m En lugares con topografiacutea irregular se debe vigilar el manteni-miento de estas cotas respecto de los puntos desde los que los animales puedan saltar

bull La extensioacuten del vallado en altura mediante una visera suele justificarse como meacutetodo de impedir el escalamiento por personas y para dificultar el salto de los ceacutervidos Desgracia-damente se ha comprobado que los ciervos pueden quedar enganchados por las cuernas (al descorrear principalmente) y morir en es-tas estructuras Por este motivo en caso de colocarse visera es recomendable situarla ha-cia el interior de la infraestructura (Figura 2A)

bull Durante la instalacioacuten se debe prestar atencioacuten a que no queden huecos debidos a la topogra-fiacutea irregular del terreno o a una deficiente unioacuten con estructuras como los pasos inferiores

bull La parte inferior del vallado debe evitar que la atraviesen animales de menor tamantildeo lo que se consigue mediante el uso de mallas de luz progresiva yo con la utilizacioacuten de una malla accesoria en los 50-100 cm inferiores del

vallado (Figura 2B) En ocasiones maacutes pun-tuales (pe alrededor de charcas de criacutea) se utilizan vallas macizas de diversos materiales para evitar el acceso de anfibios y reptiles a las carreteras (Figura 3A)

bull La parte inferior de la malla debe anclarse o enterrarse en el suelo de modo que se dificul-te en lo posible la apertura de pasos bajo ella (pe por los conejos) o el levantamiento de la valla (tejoacuten jabaliacute) Ademaacutes puede dificultar la apertura de huecos por la escorrentiacutea En el caso de zonas con presencia de jabaliacute suele recomendarse un enterramiento de 30-40 cm o complementarse con un cementado de la base de la malla (Figura 3B)

Figura 3 Ejemplos de buenas praacutecticas en cerramientos vallado es-pecial para evitar el acceso de anfibios a la calzada (A) ubicado en un tramo conflictivo por el paso estacional de anfibios en la carretera M-618 (Madrid) y detalle de vallado enterrado en la base (B) en la autopista AP-51 en la provincia de Aacutevila

En todo caso el mantenimiento del vallado es vi-tal para asegurar que no pierda eficacia ya que la generacioacuten de huecos por los propios animales ac-cidentes con salida de la viacutea o las condiciones am-bientales resulta inevitable La deteccioacuten de estas alteraciones en el vallado puede hacerse durante la vigilancia rutinaria del entorno coincidiendo con las tareas de limpieza o tras detectarse el atropello de animales de mediano o gran tamantildeo en la calzada

La presencia del cerramiento y su adecuacioacuten para ha-cerlo impermeable a la fauna tienen un posible efecto negativo si un animal consigue entrar en la infraestruc-tura le seraacute extraordinariamente difiacutecil salir de ella Tal y como se ha mencionado anteriormente el manteni-miento en perfecto estado del vallado es complejo por lo que praacutecticamente siempre quedaraacute alguna gatera o hueco por el que pueda entrar un animal Ademaacutes toda carretera vallada posee en cada enlace con otra

viacutea de menor entidad tantas aperturas en el vallado como entradassalidas de vehiacuteculos tenga por lo que la presencia esporaacutedica de animales dentro del cerra-miento es inevitable En consecuencia los vallados ac-tuales al menos en lugares sensibles para la fauna disponen de dispositivos de escape que permiten el paso en un solo sentido (hacia el exterior) de los ani-males que se encuentren en la infraestructura

En los uacuteltimos antildeos se han instalado multitud de dispositivos de este tipo en las nuevas infraestruc-turas habieacutendose ensayado dos tipos principales puertas y rampas de escape La eficacia de estas me-didas debe estar determinada por dos factores fun-damentales su disentildeo y ubicacioacuten si bien hasta el momento son escasas las investigaciones en las que se haya comprobado su efectividad para permitir la salida de los animales que accidentalmente se han internado en la viacutea (porcentaje de eacutexito tiempo de salida etc veacutease no obstante Cuadro 1) Siacute se han evaluado algunos elementos clave de su funcionali-dad en infraestructuras en las que se han instalado y existen observaciones maacutes o menos sistemaacuteticas que han permitido actualizar las recomendaciones sobre su disentildeo respecto a las primeras propuestas

Las puertas o portillos de escape consisten en es-tructuras incluidas en el vallado y disentildeadas de modo que los animales puedan abrirlas en el sen-tido de salida de la infraestructura pero no en el contrario Los modelos maacutes habituales consisten en una estructura de una sola hoja basculante formada por un marco rectangular con las bisagras ubicadas en su parte superior Este tipo de disentildeo se ha reali-zado en dimensiones variables desde apenas 25 cm de lado hasta 180 m de alto siendo poco recomen-dable utilizar tamantildeos demasiado angostos para la mayor parte de las especies o tan grandes que el peso de la puerta impida su apertura a la praacutectica totalidad de las especies En todo caso los portillos de escape tienen dos problemas de mantenimiento que deben valorarse adecuadamente las piezas moacute-viles requieren un engrasado perioacutedico para conser-var su funcionalidad y la hierba crecida en la parte baja de la puerta debe eliminarse para evitar el atas-co de la estructura Para este uacuteltimo fin en ocasio-nes se cementa la superficie sobre la que se apoya la puerta Por uacuteltimo las puertas de varillas flexi-bles (de movimiento horizontal) que se ensayaron inicialmente para facilitar la salida de los ceacutervidos (Velasco et al 1995) se encuentran desaconsejadas tras comprobarse que estos animales aprenden a abrirlas en sentido contrario y las usan rutinaria-mente para acceder a los bordes de la carretera en los que alimentarse

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Figura 2 Tipos de cerramientos recomendados vallado de 2 m de altura con visera hacia el interior (A) dispuesto en un tramo del Tren de Alta Velocidad Madrid-Sevilla (Toledo) y vallado reforzado en la base (B) en un tramo de la autoviacutea A-66 (Leoacuten)

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En liacuteneas generales la utilizacioacuten de dispositivos moacuteviles (pe puertas basculantes) se recomienda uacutenicamente para especies de tamantildeo medio y pe-quentildeo (Figura 4A) y solo si se realizan labores de mantenimiento de forma regular

El segundo tipo de estructura recomendado actual-mente como mejor opcioacuten son las rampas de esca-pe De modo simplificado se trata de estructuras de relleno que facilitan el acceso de los animales a la parte alta del vallado con el objetivo de que puedan saltar al exterior El caraacutecter unidireccional de dichas estructuras se consigue realizando el relleno en un solo lado del vallado lo que suele obligar a sustituir en ese punto la valla metaacutelica por una estructura riacutegida que soporte la carga del montiacuteculo de tierra (o ramas) que forma la plataforma de ascenso hasta la parte alta del cerramiento Las primeras estructu-ras de este tipo que se establecieron consistiacutean en rampas de apenas 40-50 cm de ancho construidas con ladrillos yo tableros cuya funcionalidad se ha puesto en duda para especies medianas y grandes Por este motivo actualmente suelen realizarse en forma de rampas de tierra apoyadas sobre un muro adosado al interior del vallado (Figura 4B)

Cuadro 1 Efectividad de los dispositivos de escape para ciervos (Bissonette y Hamer 2000)

En las carreteras de Utah (Estados Unidos) donde la presencia de ceacutervidos en la calzada era relativamente frecuente se realizoacute un estudio para evaluar la efectividad de dos tipos de dispositivos de escape las rampas de escape de tierra frente a las puertas unidireccionales

En dichos estudios se comproboacute coacutemo los ciervos utilizaban entre 8 y 10 veces maacutes las rampas de escape frente a las puertas con la ventaja antildeadida de que las rampas apenas requieren mantenimiento

Los autores recomiendan la instalacioacuten de este tipo de rampas cada 400 m en lugares con elevada concentracioacuten de atropellos y cada 800 m en el resto

Finalmente existen dos recomendaciones que se con-sideran claves para facilitar que un animal accidental-mente entrado en la viacutea y que no dispone de infor-macioacuten aprendida sobre ella pueda utilizar los dispo-sitivos de escape En primer lugar solo si la estructura de escape se encuentra ubicada en una querencia del animal (punto en el que de forma natural el animal va a buscar refugio o intentar huir) es previsible que la utilice Por este motivo se sugiere que en la medida de lo posible los dispositivos de escape se ubiquen en esquinas del vallado a poder ser en la base de tramos en terrapleacuten en los que la plataforma se encuentra maacutes alta que el propio vallado o en otros puntos que sean previsiblemente direcciones de huida natural de los animales En segundo lugar se recomienda disponer una pequentildea valla de forma perpendicular al cerra-miento que emboque a los animales hacia el punto en que se encuentra el dispositivo de escape

2 Drenajes

Las obras de drenaje trasversal a la viacutea (lsquodrenajesrsquo en adelante) son estructuras imprescindibles en las infra-estructuras lineales y resultan muy numerosas en la mayor parte de las situaciones La necesidad de eva-cuar la escorrentiacutea superficial procedente de las super-ficies de baja capacidad de infiltracioacuten (plataformas taludes) y el hecho de que la traza corte de for-ma repetida el terreno y los flujos de agua naturales obliga a construir obras de drenaje que atraviesen la carretera o la liacutenea feacuterrea a intervalos frecuentemente inferiores a los 500 m Esta distancia es menor cuanto maacutes ondulado es el paisaje atravesado y mayores las

precipitaciones del aacuterea en cuestioacuten Dado el caraacutecter de estructuras lsquofuncionales de la viacutearsquo (necesarias por motivos intriacutensecos a la construccioacuten de la infraestruc-tura) y muy abundantes son las candidatas principales para ejercer un papel relevante en la permeabilizacioacuten para la fauna de las carreteras y ferrocarriles como han demostrado diferentes estudios (Yanes et al 1995 Clevenger et al 2001 Mata et al 2005)

La adaptacioacuten de los drenajes para facilitar su uso por la fauna es por tanto una de las medidas maacutes frecuentemente aplicadas y de mayor potencial des-de una perspectiva de coste-beneficio Ademaacutes su uso por diferentes grupos de vertebrados se ha com-probado incluso en el caso de carreteras sin vallar y traacutefico moderado en las que estos podriacutean cruzar por encima de la plataforma (Ascensatildeo y Mira 2007) La adaptacioacuten de los drenajes pasa por facilitar el acceso de los animales hacerlos maacutes amplios y lu-minosos y evitar que su encharcamiento impida el uso por especies no asociadas a medios acuaacuteticos

Las principales recomendaciones son

bull Salvo en situaciones excepcionales (pe tra-mos largos en trinchera) todas las estructuras de este tipo deben construirse de lado a lado del vallado evitando la existencia de drenajes internos al vallado

bull La revegetacioacuten en torno a las embocaduras es-pecialmente los laterales de las entradas debe disentildearse de modo que minimizando el riesgo de obstruir el drenaje se favorezca la aproxi-macioacuten de las especias maacutes reacias (pe con la plantacioacuten tanto de herbaacuteceas como de matorra-les en los laterales de modo que ofrezcan cober-tura a las distintas especies hasta la misma boca de la estructura actuando a modo de embudo)

bull El vallado debe servir para dirigir los animales hacia estos puntos lo que puede requerir un refuerzo de la base con malla de luz reducida o en aacutereas sensibles de anfibios la utiliza-cioacuten de un vallado especial En estos casos se recomienda un vallado opaco de paredes lisas y al menos de 40 cm de alto que sirva de estructura guiacutea e impida su acceso a la calzada (Figura 2)

bull Los accesos deben resultar sencillos y el re-corrido previsto de los animales tener una continuidad adecuada evitando el cruce de cauces canales escalones o saltos Con fre-cuencia las entradas o salidas de los drenajes

deben pavimentarse o cubrirse de cantos de modo que se impida la erosioacuten del sustrato a la vez que se dispone de una superficie por la que los animales pueden acceder

bull Las dimensiones miacutenimas recomendadas para la seccioacuten de los drenajes son 2 x 2 m Se recomienda sobredimensionar estas estructuras (tradicionalmente se utilizaban cantildeos de (50-60 cm) para reducir el efecto tuacutenel de modo que la anchura del paso de-beraacute aumentarse si la longitud es mayor El iacutendice de apertura (Cuadro 2) recomendado en drenajes es de 01-05 si bien valores de 004-006 se consideran adecuados para los anfibios

bull La existencia de una apertura intermedia que deacute algo de luz al drenaje en general una ar-queta con rejilla por la que evacuacutean las cune-tas ubicadas en la mediana de las autoviacuteas se considera positiva para el uso por la fauna

bull Se recomienda que la seccioacuten de los drenajes tenga la base plana ya que la altura que al-canza el agua en momentos con escorrentiacutea es muy inferior De hecho en este tipo de estructura la existencia de una superficie de paso en seco o con apenas un par de cen-tiacutemetros de agua es frecuente a lo largo de praacutecticamente todo el antildeo

bull En los casos en que se prevea el encharcamien-to maacutes o menos continuo de la obra de drenaje (arroyos permanentes ubicacioacuten en aacutereas en-charcadizas) se recomienda la disposicioacuten de banquetas laterales que aseguren la existencia de paso en seco (Figura 5) La efectividad de estas estructuras se ha comprobado incluso en lugares en que se han construido a posteriori

Figura 5 Drenaje adecuado con banquetas laterales (TAV Madrid Barcelona tramo en la provincia de Guadalajara)

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Figura 4 Dispositivo de escape para tejones en una autoviacutea hol-andesa (arriba) y rampa de escape en un tramo de la provincia de Caacuteceres en la autoviacutea A-66 (abajo)

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Cuadro 2 Iacutendice de apertura

El iacutendice de apertura (IA) de una estructura transversal a una infraestructura es un indicador comuacutenmente utilizado para establecer las dimensiones recomendables para asegurar el uso por la fauna Este iacutendice relaciona la seccioacuten de la estructura con su longitud de modo que permite ajustar el ancho de los pasos en funcioacuten de la longitud que deben tener en razoacuten del tipo de infraestructura y las condiciones locales de su ubicacioacuten (Olbrich 1984) Su amplia aceptacioacuten proviene de que este paraacutemetro puede servir como un indicador (inverso) del efecto tuacutenel presuntamente percibido por las especies al utilizar las estructuras inferiores a la viacutea (Clevenger et al 2005 y Hervaacutes et al 2006)

El iacutendice de apertura se definioacute originalmente para las estructuras inferiores a la viacutea como

IA pasos inferiores = seccioacutenlongitud

Figura 6 Ejemplos de caacutelculo del iacutendice de apertura en dos drenajes de diferente seccioacuten drenaje circular (izquierda) y drenaje adecuado (derecha)

No obstante tambieacuten ha sido adaptado para los pasos superiores para los cuales se ha establecido como una relacioacuten entre el ancho del paso y la longitud de este

IA pasos superiores = anchuralongitud

Por uacuteltimo las obras de drenaje transversal requie-ren un mantenimiento adecuado para no perder su funcionalidad como pasos de fauna En este sentido debe destacarse la propensioacuten a que se acumule basura en ellos arrastrada por el agua desde las cu-netas de la carretera principalmente Igualmente es frecuente el depoacutesito de sedimentos y consecuente embalsado de agua en el lado inferior como resulta-do de la peacuterdida de velocidad del agua a la salida de la obra de faacutebrica Ambos hechos pueden condicio-nar el uso por la fauna por lo que deben ser objeto de atencioacuten entre las tareas de mantenimiento

3 Pasos inferiores multifuncionales

Igual que en el caso anterior este tipo de pasos es inherente a toda infraestructura viaria estando

disentildeados para reponer caminos o pistas intersec-tadas por la viacutea Su frecuencia estaacute muy relacionada con la intensidad de uso humano y la estructura de la propiedad del territorio siendo maacutes frecuentes en zonas agriacutecolas y en las que la propiedad estaacute muy fragmentada lo que aumenta el nuacutemero de este tipo de estructuras presentes antes de construirse la infraestructura Debido a su menor coste de cons-truccioacuten en comparacioacuten con los pasos superiores las reposiciones de caminos se proyectan bajo la ca-rretera o el ferrocarril maacutes frecuentemente que sobre ellos excepto en paisajes muy llanos

Unas miacutenimas labores de adecuacioacuten de estas es-tructuras contribuyen a aumentar la permeabilidad de la viacutea facilitando maacutes sitios por los que la fauna puede franquear la infraestructura Entre ellas cabe destacar

bull Se recomienda el solado de tierra ya que los animales de menor tamantildeo rehuacuteyen atravesar superficies grandes de asfalto o cemento (Fi-gura 7A) En los casos en que por el paso dis-curre una carretera asfaltada si el traacutefico por ella no es muy intenso se pueden acondicio-nar uno o ambos laterales de la misma para el paso de los animales mediante el solado de tierra En estos casos se deberiacutea respetar al menos 4-6 m de ancho para el uso animal (Figura 7B)

bull En las aacutereas laterales destinadas al uso ani-mal se pueden disponer tocones o pequentildeos acuacutemulos de piedras que sirvan de refugios naturales para favorecer la utilizacioacuten de estos pasos por pequentildeos vertebrados Con cierta frecuencia es posible aprovechar la presencia de un regato o del drenaje lateral para faci-litar esta funcioacuten aprovechando la tendencia natural de mucho animales a desplazarse si-guieacutendolos

bull Se recomienda que el iacutendice de apertura se encuentre en el rango 06-15 y en aacutereas con poblaciones de ungulados disentildear los pasos siempre para que alcancen valores de iacutendice de apertura de 15 o superiores

bull Uno de los problemas maacutes frecuentemente detectados en los pasos inferiores de tipo mixto es la presencia de accesos comple-jos yo poco acordes con los patrones de

movimiento habitual de los animales En general los accesos maacutes faacuteciles para los animales son aquellos perpendiculares a la viacutea (idealmente con visioacuten del otro lado del paso) sin tramos largos en trinchera profun-da y que mantienen cierta coherencia con las formas del paisaje natural (idealmente en vaguada)

bull La proximidad de la vegetacioacuten en las embo-caduras puede facilitar el paso de animales lo que debe tenerse en cuenta al disentildear la revegetacioacuten del entorno

bull Por facilidad de construccioacuten y menor coste los pasos inferiores de seccioacuten rectangular (lsquocajonesrsquo) realizados mediante encofrado in situ se pueden sustituir por estructuras abo-vedadas construidas a partir de piezas pre-fabricadas La decisioacuten uacuteltima debe tomarse en funcioacuten de las condiciones locales de de-sarrollo del proyecto y de los costes relativos de distintas soluciones manteniendo en todo caso el iacutendice de apertura prescrito para la estructura

Un aspecto del mantenimiento que requieren estas estructuras consiste en evitar que el ancho antildeadido para el uso por la fauna se transforme en lugar de vertido incontrolado de residuos de construccioacuten o de caraacutecter domeacutestico tanto mediante una vigilan-cia adecuada como retirando los desechos que se detecten

Figura 7 Pasos inferiores multifuncionales con adaptaciones para favorecer su uso por la fauna con aacutereas revegetadas a ambos lados del camino en una autoviacutea holandesa (A) y un paso con solado de tierra ubicado en un tramo de la provincia de Guadalajara del TAV Madrid-Barcelona (B)

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4 Pasos superiores multifuncionales

Los puentes construidos para restituir la comuni-cacioacuten entre caminos rurales y carreteras locales interrumpidos por el trazado de la infraestructura pueden ser acondicionados tambieacuten para favorecer su uso por la fauna En general este tipo de estruc-tura es mucho menos utilizada por la fauna que los pasos inferiores multifuncionales con la excepcioacuten de los pasos superiores ubicados en puntos en que la infraestructura discurre en desmonte En estas situaciones la longitud del paso superior suele ser relativamente corta y puede coincidir con puntos frecuentemente utilizados para sus desplazamien-tos por los animales Este uacuteltimo caso suele darse en las pequentildeas lomas cubiertas de vegetacioacuten le-ntildeosa que hay con cierta frecuencia en los terrenos ondulados

Las propuestas de adaptacioacuten de estos pasos son similares a las presentadas anteriormente para los pasos inferiores multifuncionales con un par de in-dicaciones propias de ellos

bull Las dimensiones miacutenimas de estas estructu-ras deben respetar un ancho de por lo menos 10 m y un iacutendice de apertura de 08

bull Se debe minimizar en lo posible la longi-tud de los accesos que deben recorrer los animales por un medio abierto y de es-tructura no natural Si es posible deprimir la rasante de la infraestructura facilita el disentildeo de accesos maacutes cortos y con menor pendiente

bull La revegetacioacuten de las superficies sobre los pasos superiores estaacute muy condicionada por la cantidad de suelo que se puede acumular y tanto maacutes cuanto maacutes aacuterido sea el clima Por ello se debe calcular la estructura de modo que pueda soportar un espesor miacutenimo de tierra de 30 cm si se pretende realizar planta-ciones herbaacuteceas y de 60 cm para mantener vegetacioacuten arbustiva

Ademaacutes es posible aplicar otras recomendaciones propias de los pasos superiores especiacuteficos (pe pantallas laterales opacas) para mejorar el potencial de uso por la fauna (Figura 8)

5 Pasos inferiores especiacuteficos para la fauna

Los pasos inferiores especiacuteficos para la fauna son estructuras que discurren por debajo de la viacutea y cuyo objetivo principal al ser disentildeadas es facilitar los des-plazamientos naturales de los animales a traveacutes de la infraestructura Con cierta frecuencia tienen tambieacuten una utilidad para el drenaje y de hecho la presencia de un canal o regato en ellas puede favorecer su uso por la fauna En estos casos las dimensiones de la estructura no se condicionan por las necesidades de avenamiento sino por las previsibles exigencias de los animales a los que se orienta

Desde el punto de vista estructural se han cons-truido como cajones encofrados in situ boacutevedas de piezas prefabricadas y como pequentildeos puentes de vigas prefabricadas o de losa pretensada siendo

este disentildeo el maacutes habitual (Figura 9) No existe constancia alguna de que uno u otro disentildeo sea maacutes apropiado por lo que el tipo a construir dependeraacute de las condiciones concretas del proyecto La uacuteni-ca indicacioacuten a este respecto es que si se disentildean como puentes se debe evitar (o minimizar) que las juntas generen ruidos fuertes al paso de los vehiacute-culos Se ha comprobado que estos ruidos pueden alterar el comportamiento de los animales en los pasos y aunque no impiden su utilizacioacuten se teme que reduzcan su eficiencia como medida correctora

bull Sus dimensiones deben alcanzar al menos 10 m de ancho y 4 m de altura y en la medi-da de lo posible ser maacutes amplias que estos miacutenimos y dar continuidad a la topografiacutea de la vaguada en que se instalen

bull Dado que ejercen una funcioacuten fundamental en la permeabilizacioacuten de las infraestructuras para los grandes vertebrados su iacutendice de apertura debe superar el valor de 15 esta-blecido como miacutenimo para el uso por ungu-lados

bull En todo caso el solado debe ser de tierra evitaacutendose tanto los sustratos artificiales como el relleno con grava u otros materiales de construccioacuten

bull La revegetacioacuten de los accesos tiene que fa-cilitar la aproximacioacuten de los animales a las embocaduras dando continuidad a los haacutebi-tats que haya en el entorno Para atraer la fauna al entorno de los pasos se recomienda la instalacioacuten de elementos de intereacutes para la misma como charcas o majanos cerca de las embocaduras

bull La revegetacioacuten dentro del paso se ve muy limitada por las condiciones de sombra y se-quedad impuestas por su techo No obstan-te debe facilitarse en lo posible (pe bajo puentes con apertura central junto a un ca-nal de drenaje) el crecimiento de la vegeta-cioacuten al menos herbaacutecea y la lsquonaturalizacioacuten del pasorsquo se puede complementar con la co-locacioacuten de ramas o tocones de aacuterbol en el interior

bull El uso humano y la ocupacioacuten de los pa-sos para diferentes actividades debe evi-tarse mediante una combinacioacuten de ba-rreras adecuadas (pe grandes piedras) y una vigilancia efectiva (Cuadro 3 Figura 9)

bull El procedimiento y tipo de construccioacuten igual que en los pasos inferiores multifuncionales puede decidirse en funcioacuten de las condiciones concretas del proyecto

Figura 8 Dos tipos de adaptaciones para favorecer el traacutensito de la fauna por los pasos superiores multifuncionales la colocacioacuten de tocones de madera (A) y la revegetacioacuten de los laterales (B) Ambos ejemplos proceden de autoviacuteas holandesas

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Figura 9 Distintos disentildeos de pasos inferiores especiacuteficos tipo puente de tableros (A) y abovedado (B)

Las indicaciones generales que se dan para este tipo de estructuras son

bull Se debe cuidar de modo muy preciso su ubi-cacioacuten a fin de maximizar las probabilidades de eacutexito una vez instalados

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Cuadro 3 Uso humano de los pasos especiacuteficos para la fauna

Entre los problemas maacutes frecuentemente detectados en los pasos superiores e inferiores especiacuteficos para fauna se encuentra su utilizacioacuten humana Las actividades humanas detectadas en ellos son extraordinariamente frecuentes y abarcan desde su uso rutinario como lugares para cruzar la infraestructura hasta la apropiacioacuten para diferentes usos

La mayor parte de los pasos construidos para el uso por la fauna acaban siendo utilizados tambieacuten por el hombre en sus desplazamientos Este uso suele incluir siempre el cruce esporaacutedico de peatones pero no es extrantildeo incluso el establecimiento de pistas permanentes en ellos En Espantildea solo en torno a un 45 de los pasos inferiores y un 30 de los pasos superiores de las estructuras disentildeadas especiacuteficamente para fauna disponen de alguacuten tipo de impedimento para evitar el traacutensito de vehiacuteculos

El uso peatonal siempre que no sea intensivo puede considerarse poco relevante para la efectividad de los pasos ya que la mayor parte de los ecosistemas ibeacutericos se encuentran maacutes o menos humanizados y la fauna resulta tolerante a esta coincidencia con el hombre si bien se recomienda controlar la actividad humana en ellos (Clevenger y Waltho 2000) Sin embargo el seguimiento de pasos muestra que es frecuente el uso de los pasos por vehiacuteculos agriacutecolas o de campo (motos quads Figura 10A) que pueden sortear los impedimentos que se ponen a los vehiacuteculos De hecho en algunos lugares en que se habiacutean colocado grandes piedras para dificultar el paso de vehiacuteculos estas aparecen desplazadas labor relativamente sencilla si se dispone de un tractor Por tanto este tipo de uso solo puede ser evitado mediante una vigilancia adecuada y la sancioacuten del uso indebido

Mencioacuten aparte merecen el establecimiento de actividades humanas como el almacenaje de materiales (agriacutecolas de construccioacuten) o el estabulamiento de animales en el interior de los pasos (Figura 10B) Esta ocupacioacuten ilegal del dominio puacuteblico y la perturbacioacuten del uso para el que fueron disentildeados los pasos resulta de todo punto inapropiada y debe perseguirse como parte de las tareas de seguimiento o mantenimiento de las infraestructuras Otro tanto podriacutea decirse del establecimiento de pistas permanentes atravesando los pasos superiores o inferiores originalmente disentildeados para su uso por la fauna

Figura 10 Usos inadecuados que comprometen la efectividad de los pasos inferiores especiacuteficos traacutensito de vehiacuteculos (A) y aprovecha-miento del paso como establo (B)

6 Pasos superiores especiacuteficos para la fauna

Los pasos superiores especiacuteficos son de un modo geneacuterico puentes sobre la infraestructura lineal cuya razoacuten de ser no consiste en permitir el cruce de un camino o carretera sino el de un (supuesto) camino natural de la fauna (Cuadro 4) Bajo esta premisa se han ensayado diferentes tipos de paso superior especiacutefico que pretenden adecuar las caracteriacutesticas de los puentes destinados al uso humano para las peculiaridades de su uso previsto Las principales diferencias nacen de la necesidad de establecer cier-ta cantidad de vegetacioacuten sobre la estructura de un intento de reducir el efecto tuacutenel que pueden per-cibir los animales en el paso y de una disminucioacuten de la perturbacioacuten del paso por el traacutefico que circula bajo eacutel

Las recomendaciones que maacutes comuacutenmente se ha-cen para los pasos superiores especiacuteficos son

bull Como en todos los pasos especiacuteficos se debe prestar una atencioacuten detallada a la ubicacioacuten de modo que se ajuste lo maacutes posible a la existencia de esas rutas propias de los anima-les que se pretende reponer

bull La anchura miacutenima recomendada para estas estructuras es de 20 m no siendo infrecuen-tes dimensiones hasta el doble de este valor pese a su elevado coste

bull El iacutendice de apertura miacutenimo recomendado es de 08 (Cuadro 2)

bull A fin de reducir el efecto tuacutenel que pueden percibir los animales se suelen disentildear con planta en forma de diaacutebolo de modo que la anchura miacutenima se reduce al aacuterea central y los animales tienen una visoacuten maacutes amplia de la salida del paso independientemente del punto por donde lo esteacuten cruzando (Figura 11A)

bull Los accesos deben disentildearse de modo que los perfiles finales sean similares a los del entorno evitando la presencia de pendientes muy pronunciadas que dificulten la visioacuten y el caminar de los animales (Figura 11B)

bull Para atraer la fauna al entorno de los pasos se recomienda la instalacioacuten de elementos de intereacutes para la misma tales como charcas o majanos en los accesos o su entorno

bull Los laterales del paso deben cubrirse con pantallas opacas de 2 m de altura para redu-cir la perturbacioacuten que afecta al aacuterea de uso por los animales principalmente las luces de los coches y el ruido Dichas pantallas suelen construirse mediante tablones o en forma de petos de cemento

bull La revegetacioacuten debe procurar cobertura su-ficiente para que los animales reduzcan su desconfianza a cruzar la infraestructura tanto en los accesos como en el propio paso

bull El grosor miacutenimo de tierra vegetal que debe tener el paso en su parte superior es de 03 m en caso de utilizar plantaciones herbaacuteceas y de 06 m para arbustos

bull En los casos en que no se establezca una cobertura arbustiva en el paso es posible fa-cilitar refugios para la fauna a lo largo del paso acumulando tocones u otros elementos similares

bull Finalizada la construccioacuten deben retirarse to-dos los materiales sobrantes y se deben elimi-nar los caminos utilizados durante la obra para minimizar la frecuentacioacuten humana del paso

bull En todo caso es importante restringir la posi-bilidad de acceso de vehiacuteculos al paso tanto mediante la prohibicioacuten expresa como insta-lando impedimentos a la circulacioacuten Para ello es frecuente la instalacioacuten de grandes piedras espaciadas entre siacute de modo que permitan el paso de los animales pero no de los vehiacuteculos

Entre las recomendaciones anteriores y como ca-racteriacutestica propia de los pasos superiores especiacute-ficos construidos en zonas de clima seco o aacuterido merece la pena comentar brevemente el problema de las revegetaciones La existencia de un periacuteodo prolongado de sequiacutea hace que el mantenimiento de vegetacioacuten lentildeosa en los pasos se encuentre muy limitado por la profundidad del suelo y el agua que puede retener Este hecho se combina con la com-plejidad teacutecnica (y el coste) de realizar estructuras capaces de soportar voluacutemenes de tierra grandes Por ello la posibilidad de realizar plantaciones le-ntildeosas sobre los pasos especiacuteficos es reducida y se encuentra limitada a las situaciones maacutes oacutepti-mas (puentes reforzados para soportar una mayor carga climas subhuacutemedoshellip) En todo caso dado que en los ecosistemas mediterraacuteneos es frecuente la existencia de zonas abiertas el problema no es

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tan grave y la experiencia muestra que los pasos superiores especiacuteficos descubiertos de vegetacioacuten lentildeosa pueden ser utilizados por gran nuacutemero de especies Por tanto en la mayor parte de los casos puede ser maacutes apropiado asumir que la vegetacioacuten sobre el paso va a tener caraacutecter herbaacuteceo (no asiacute los accesos) y disentildear las plantaciones lentildeosas del paso y su entorno de acuerdo con ello

Un elemento maacutes que puede favorecer el uso por la fauna de los pasos superiores especiacuteficos y que se ha observado aunque no experimentado es el esta-blecimiento tras la construccioacuten de plantaciones her-baacuteceas atractivas para los animales Asiacute en Espantildea se ha visto que tanto los lagomorfos como los ungu-lados pueden verse atraiacutedos a los pasos especiacuteficos por la plantacioacuten en ellos de especies pratenses en especial si se mantienen verdes y con porte desarro-llado tras el agostamiento de los pastos naturales del entorno En paralelo en Australia se ha comprobado que el riego durante la estacioacuten seca de los pasos sir-ve para atraer hasta ellos a gran nuacutemero de especies de los ecosistemas adyacentes pudiendo facilitar el uso por los animales de la nueva estructura

Figura 11 Pasos superiores especiacuteficos paso en forma de diaacutebolo construido en un tramo en la provincia de Palencia en la autoviacutea A-231 (A) y otro paso ubicado en el tramo leoneacutes de la autoviacutea A-66 en el que se pueden observar como los accesos son tendidos para favorecer su uso por la fauna (B)

Cuadro 4 Ubicacioacuten de los pasos especiacuteficos para la fauna

Maacutes allaacute de las caracteriacutesticas de la estructura por la que los animales se vean forzados a cruzar las infraestructuras lineales valladas la frecuencia de utilizacioacuten de los pasos de fauna (en sentido amplio) se encuentra estrechamente determinada por las caracteriacutesticas del entorno en que se ubica De nada sirve instalar una estructura especialmente disentildeada para la fauna en un punto al que los animales no pueden acceder por la existencia de impedimentos ajenos a la infraestructura o si las condiciones de haacutebitat del entorno hacen altamente improbable la aproximacioacuten de los animales al mismo Por ambos motivos la ubicacioacuten de estructuras especiacuteficamente disentildeadas para la fauna inevitablemente infrecuentes y con un coste econoacutemico elevado debe tener en cuenta las condiciones del entorno a escala amplia y de detalle La ubicacioacuten de los pasos de fauna en aacutereas que desde una perspectiva espacial amplia sean las maacutes adecuadas para una futura utilizacioacuten por los animales enlaza directamente con la idea de corredores regionales de fauna definidos como las aacutereas de maacutexima probabilidad de uso por un conjunto de taxones para sus desplazamientos por el territorio teniendo en consideracioacuten la existencia de aacutereas nuacutecleo o de maacuteximo intereacutes de conservacioacuten (pe sitios o haacutebitats Red Natura 2000) que alojan las poblaciones a conectar En los uacuteltimos antildeos se han desarrollado de forma intensa los meacutetodos formales de anaacutelisis del territorio desde este punto de vista basados en el uso de sistemas de informacioacuten geograacutefica Aunque dichos sistemas se apoyan en un sustento teoacuterico no del todo comprobado se considera que a diacutea de hoy los modelos de conectividad son la mejor aproximacioacuten posible para la definicioacuten de corredores con una perspectiva amplia (regional o comarcal) Los meacutetodos aplicables son muacuteltiples y el Ministerio de Medio Ambiente y Medio Rural y Marino ha publicado recientemente unas prescripciones acerca de los miacutenimos a tener en cuenta en este sentido en las fases de planificacioacuten y trazado de las infraestructuras (MARM 2010)

Cuadro 4 Ubicacioacuten de los pasos especiacuteficos para la fauna (Continuacioacuten)

Con perspectiva maacutes local a la escala de anteproyecto o proyecto de construccioacuten de una infraestructura la eleccioacuten de la ubicacioacuten y tipo concreto de paso de fauna a instalar debe basarse en una combinacioacuten de anaacutelisis de detalle del entorno combinada con un muestreo de la fauna que utiliza el aacuterea Por una parte los pasos de fauna deben instalarse en los puntos en que aparece el haacutebitat preferido por las especies objetivo siendo necesaria una evaluacioacuten de detalle del mismo (a escala 15000 o superior) Ademaacutes este anaacutelisis tiene que ser complementado con la evaluacioacuten en campo de los haacutebitats de intereacutes y la inexistencia de impedimentos para el movimiento de los animales Asiacute la existencia de vallados muy impermeables entre fincas o el grado de desarrollo de la vegetacioacuten arboacuterea y arbustiva no pueden evaluarse de modo adecuado sin la realizacioacuten de trabajo de campo

A la hora de decidir a pequentildea escala la ubicacioacuten y tipologiacutea de un paso de fauna se pueden tener en cuenta las caracteriacutesticas del paisaje que condicionan el movimiento de los animales Se sabe que la topografiacutea condiciona los desplazamientos de modo que los recorridos que suelen realizar los animales reflejan una combinacioacuten de la optimizacioacuten entre la distancia a recorrer y la facilidad de movimiento en el recorrido En este contexto evitar la existencia de pendientes grandes resulta evidente pero no lo es tanto que los animales acaben utilizando el entorno de los fondos de valle y las hombreras de las lomas en parte precisamente como respuesta al mismo proceso De hecho la sabiduriacutea popular (cinegeacutetica principalmente) apunta a que las vaguadas son en general maacutes utilizadas por la fauna que las partes altas y ello puede apoyar la eleccioacuten prioritaria de la solucioacuten lsquopaso inferiorrsquo en situaciones en que sea posible elegir entre la ubicacioacuten de una estructura sobre o bajo la viacutea No obstante otra parte muy relevante de las claves que usan los animales para desplazarse por el territorio depende de elementos maacutes o menos evidentes del haacutebitat lo que aconseja hacer una prospeccioacuten visual intensiva de los haacutebitats del entorno asiacute como una buacutesqueda de trochas y evidencias del uso por vertebrados a la hora de decidir acerca de la (elevada) inversioacuten en un paso especiacutefico para la fauna

7 Ecoductos

Los ecoductos son estructuras construidas sobre la viacutea para facilitar el cruce de la fauna y que por sus caracteriacutesticas se asemejan a un tuacutenel (Figura 12A) De hecho su principal diferencia con los pasos su-periores especiacuteficos es que sus grandes dimensio-nes y la capacidad de establecer vegetacioacuten sobre ellos permiten una oacuteptima integracioacuten en el entorno Dado el elevadiacutesimo coste de estas estructuras en ellas son de aplicacioacuten la praacutectica totalidad de las indicaciones presentadas anteriormente para los di-ferentes tipos de estructuras adecuadas a la fauna y de modo destacado

bull Su ubicacioacuten debe ser especialmente estudia-da y debe asegurarse una continuidad ade-cuada del futuro corredor de fauna con los haacutebitats del entorno

bull Su anchura miacutenima debe ser de al menos 80 m siendo deseable ampliar este valor en la medi-da de lo posible a fin de asegurar la existencia

de cierta cantidad de haacutebitat poco perturbado en el aacuterea central del paso

bull Se deben disponer pantallas opacas de unos 2 m de altura en los laterales del paso

bull El aislamiento respecto del ruido del traacutefico debe asegurarse mediante motas de tierra la-terales de al menos 1 m de altura

bull La revegetacioacuten debe orientarse a reconstruir haacutebitats muy similares a los existentes en el entorno habieacutendose definido como groso-res miacutenimos de tierra vegetal a utilizar 03 m para plantaciones herbaacuteceas 06 m para arbustos y 15 m para aacuterboles

bull Se recomienda realizar plantaciones heterogeacute-neas sobre el ecoducto (Figura 12B) con es-pacios abiertos en los sectores centrales para que los animales tengan buena visibilidad del extremo contrario del paso y plantaciones maacutes densas de aacuterboles y arbustos en los laterales

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Figura 12 Ecoducto de tipo falso tuacutenel construido en un tramo de la provincia de Caacuteceres de la autoviacutea A-66 (A) Y detalle de la revegetacioacuten realizada en el interior del paso (B)

La teacutecnica de construccioacuten maacutes habitual consis-te en la generacioacuten de falsos tuacuteneles mediante la construccioacuten de boacutevedas y su cubricioacuten posterior si bien la utilizacioacuten de teacutecnicas de construccioacuten de tuacuteneles seriacutea maacutes deseable allaacute donde sea posible para minimizar los impactos sobre el aacuterea En rela-cioacuten con la teacutecnica de construccioacuten debe tenerse en cuenta que la instalacioacuten de falsos tuacuteneles obli-ga a acumular temporalmente grandes voluacutemenes de material de relleno y necesita el desarrollo de obras muy impactantes con abundante maquina-ria pesada en el lugar de la construccioacuten Ambos hechos deben tenerse en cuenta a la hora de pla-nificar una de estas estructuras en especial si van a ubicarse en lugares de alto valor natural Como contrapartida en algunas ocasiones los falsos tuacute-neles sirven como ubicacioacuten para el vertido de ma-teriales excedentes de otras partes (proacuteximas) del trazado en especial cuando se disentildean en paisajes llanos en los que el falso tuacutenel no se ubique en el lugar en que anteriormente existiacutea una loma

Una uacuteltima recomendacioacuten se centra en la necesi-dad de asegurar la pervivencia a largo plazo de la funcionalidad del ecoducto y su mantenimiento al margen de actividades humanas impactantes Para ello idealmente estas estructuras deberiacutean ubicarse siempre en terrenos cuya integridad a largo plazo pueda asegurarse y de modo prioritario sobre zonas de propiedad puacuteblica que aseguren el mantenimien-to de un aacuterea superior a la habitual de expropiacioacuten Otras aacutereas potencialmente interesantes pueden ser grandes fincas sin vallados interiores y que por su utilizacioacuten (pe caza mayor) permitan suponer que no se van a dividir En todo caso deberiacutean esta-blecerse normas para asegurar que el ecoducto y su entorno se mantengan libres de perturbacioacuten de forma maacutes o menos permanente

8 Viaductos

Los viaductos son estructuras de grandes dimen-siones que sirven para que la infraestructura atra-viese vaguadas del terreno y que regularmente se han exigido durante la construccioacuten de carreteras y ferrocarriles para afectar miacutenimamente las aacutereas atravesadas y para facilitar la conectividad del te-rritorio Hasta hace relativamente poco tiempo no se habiacutea registrado cientiacuteficamente su nivel de per-meabilidad para la fauna (Kusak et al 2009) que responde a la percepcioacuten de ellos como estructuras muy permeables y por lo tanto altamente reco-mendables

En el disentildeo y ejecucioacuten de los viaductos cuando se persigan objetivos de conservacioacuten debe prestarse atencioacuten prioritaria a la conservacioacuten de los haacutebitats situados bajo la estructura La construccioacuten de estas estructuras requiere el acceso y trabajo de la maqui-naria pesada como miacutenimo en los puntos en que se asientan las pilas De hecho si no hay indicaciones en contra el procedimiento rutinario de construc-cioacuten pasa por la realizacioacuten de viacuteas de servicio bajo el futuro viaducto que alcanzan la mayor parte de la superficie del mismo Por este motivo cuando se pretende proteger los haacutebitats que van a quedar bajo el viaducto suele exigirse

bull La construccioacuten de la plataforma mediante teacutecnicas miacutenimamente invasivas del fondo del valle (cimbras autoportantes o tableros empu-jados) aunque ello represente un sobrecoste relevante

bull La limitacioacuten en el nuacutemero o ubicacioacuten de los apoyos

bull El trabajo independiente desde ambos lados del valle de modo que se respete la integri-dad del riacuteo y la vegetacioacuten de ribera circun-dante prohibiendo especiacuteficamente la cons-truccioacuten de pistas o vados temporales que los afecten

Aunque las dimensiones de los viaductos suelen ser grandes sobrepasando holgadamente las necesida-des detectadas por los caacutelculos hidraacuteulicos es fre-cuente el establecimiento de indicaciones como

bull El respeto de los cauces la vegetacioacuten de ri-bera y un entorno general de 10 m de los lu-gares de mayor valor siempre que sea posible

bull Nunca ubicar estribos de los viaductos o pilas en el cinturoacuten de vegetacioacuten de ribera ni a menos de 5 m de eacutel

bull Mantener siempre que sea posible una altu-ra tal que no se rompa la continuidad de la vegetacioacuten de ribera y en ninguacuten caso una altura sobre el suelo inferior a 5 m en caso de vegetacioacuten herbaacutecea o arbustiva y 10 m en zonas arboladas

Ya que los viaductos junto a los tuacuteneles son los uacutenicos tramos en que se mantiene la continuidad del paisaje atravesado por la infraestructura en ellos y su entorno se deben extremar las medidas de vigilancia y control de los usos del suelo con el objetivo uacuteltimo de preservar su adecuacioacuten para la fauna Dado que en estas aacutereas son de aplicacioacuten las

normas sobre expropiacioacuten de terrenos y control de actividades en el entorno de infraestructuras existen mecanismos para segurar la consecucioacuten de dicho objetivo

9 Otros

Pasos aeacutereos entre aacuterboles para especies arboriacutecolas

Este tipo de dispositivos se han construido y com-probado su eacutexito para los marsupiales arboacutereos de Australia (Taylor y Goldingay 2009) En Espantildea se recomienda su utilizacioacuten en aquellos lugares donde existan poblaciones de ardilla si bien se ha compro-bado coacutemo estas especies tambieacuten pueden utilizar pasos inferiores adaptados para la fauna y espe-cialmente aquellos de disentildeo especiacutefico (Figura 13)

Figura 13 Ardilla roja cruzando por un paso inferior especiacutefico de la autoviacutea A-40 (Cuenca)

IV EacuteXITOS Y FRACASOS

Ante este conjunto de actuaciones propuestas y desde la perspectiva obtenida tras varias deacutecadas de experiencias internacionales en este aacutembito sur-gen diversas preguntas que merece la pena plantear en este punto iquestse puede considerar exitosa la apli-cacioacuten de las medidas correctoras de la fragmenta-cioacuten de haacutebitats por infraestructuras lineales presen-tadas iquestqueacute evidencias existen de su efectividad La contestacioacuten de estas preguntas de forma sinteacutetica si bien con una inevitable peacuterdida de matices se aborda en los siguientes paacuterrafos Paacuterrafos en los que se pretende mostrar el gran avance que se ha producido en Espantildea en el campo de la restaura-cioacuten ecoloacutegica de los efectos de fragmentacioacuten ge-nerados por las infraestructuras lineales y algunas

lagunas existentes auacuten hoy A fin de tener una visioacuten relativamente completa del tema se abordan las tres perspectivas que delimitan la puesta en marcha de soluciones reales a un problema en el que conflu-yen aspectos administrativos teacutecnicos y cientiacuteficos

En primer lugar debe destacarse que en el plano ad-ministrativo y formal de los procesos de evaluacioacuten de impacto ambiental (EIA) a que se someten los proyectos de nuevas infraestructuras se ha integra-do de forma bastante soacutelida la atencioacuten al problema de la fragmentacioacuten de poblaciones fauniacutesticas Y en este plano se estaacuten dando pasos en la direccioacuten adecuada Asiacute las administraciones ambientales en general y el Ministerio de Medio Ambiente y Medio

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Rural y Marino en particular llevan antildeos exigiendo la adopcioacuten de medidas contra la fragmentacioacuten de haacutebitats en las declaraciones de impacto ambiental (DIA) de carreteras y ferrocarriles Ademaacutes se han publicado una serie de documentos con intencioacuten prescriptiva en los que se sientan las bases de coacutemo actuar correctamente durante las fases de planifica-cioacuten construccioacuten y explotacioacuten de las viacuteas (MMA 2006 MMARM 2008 y MMARM 2010) Dichos docu-mentos estaacuten siendo aplicados caso por caso a los nuevos proyectos sometidos a EIA de forma que la exigencia de su uso en las DIA resulta equivalente para cada proyecto individual a la existencia de una norma superior que los hiciese prescriptivos para to-dos los proyectos El uacuteltimo documento ademaacutes se enfoca tambieacuten a las fases de planificacioacuten someti-das a evaluacioacuten ambiental estrateacutegica

Como contrapunto a este optimismo deben sentildea-larse al menos dos elementos que atantildeen a la aten-cioacuten desde las Administraciones a la fragmentacioacuten de poblaciones por las nuevas infraestructuras de transporte Por un lado la experiencia de las uacuteltimas dos deacutecadas muestra que el avance en este tema no es continuo ni puede darse ya por consolidado definitivamente Asiacute algunos proyectos relativamen-te nuevos se han desarrollado con una atencioacuten a la fragmentacioacuten de poblaciones inferior a la que se habiacutea aplicado (por la misma Administracioacuten) a casos anteriores El hecho de que el tratamiento se desarrolle caso a caso y dependiente de la redac-cioacuten de la DIA correspondiente hace que todos los sectores involucrados deban mantenerse vigilantes ante la aprobacioacuten de nuevos proyectos Por otro

lado cada vez se detecta con mayor intensidad la necesidad de reforzar los procedimientos de vigilan-cia y seguimiento de los proyectos aprobados ya que auacuten son frecuentes cambios sobrevenidos en estos incluso el ahorro de partidas destinadas a me-didas correctoras En este sentido deben destacarse la falta de recursos de las Administraciones ambien-tales para desarrollar adecuadamente el control ne-cesario y la praacutectica inexistencia de procedimientos formales de seguimiento a largo plazo

En segundo lugar desde una perspectiva teacutecnica se puede decir que las publicaciones referidas anterior-mente sirven de instrumento uacutetil para la redaccioacuten de los proyectos La acogida de este tipo de docu-mentos es en general buena como lo viene siendo desde la primera publicacioacuten espantildeola sobre el tema (Velasco et al 1995) En este plano los retos que se enfrentan para el futuro consisten por un lado en una adecuada aplicacioacuten de las prescripciones teacutec-nicas a cada caso concreto evitaacutendose la aplicacioacuten de las indicaciones existentes en estos documentos como recetas uacutenicas y definitivas En concreto la reduccioacuten de costes en la elaboracioacuten de los proyec-tos lleva incluso a omitir las ineludibles visitas de campo que deberiacutean guiar el disentildeo de detalle de las medidas correctoras de la fragmentacioacuten de po-blaciones de fauna Por otro lado auacuten es escasa la integracioacuten de los equipos ambientales y de disentildeo durante la gestacioacuten de los proyectos que permitiriacutea optimizar el trabajo y con cierta frecuencia se le otorga poca importancia al trabajo de los teacutecnicos ambientales durante el desarrollo de los proyectos En este uacuteltimo campo no obstante se ha avanzado mucho en los uacuteltimos antildeos

En tercer lugar la experiencia cientiacutefica acumulada en los uacuteltimos antildeos permite asegurar que el esfuerzo desarrollado por administraciones y teacutecnicos no es en balde en general las actuaciones propuestas sir-ven para la funcioacuten baacutesica para la que se disentildearon el cruce de las infraestructuras por los vertebrados De forma resumida se puede decir que en los luga-res en que se ha realizado un seguimiento cientiacutefico de las estructuras transversales a la viacutea se ha detec-tado el cruce de la praacutectica totalidad de las especies de vertebrados presentes en el entorno (Yanes et al 1995 Rodriacuteguez et al 1996 Rosell et al 1997 Peris y Morales 2004 Mata et al 2005 Mata et al 2006 Ascensatildeo y Mira 2007 Mata 2007 Grilo et al 2008 Llorente y Diacuteez 2008)

En general las estructuras transversales a las infraes-tructuras lineales resultan complementarias entre siacute en cuanto a los animales que las utilizan para cruzar

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ratonesturoacuten

gato

tejoacuten

zorro

perro

jineta

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Figura 15 Representacioacuten graacutefica en la que se sintetizan los resultados procedentes del seguimiento de 113 estructuras de la autoviacutea A-52 Se muestra la ubicacioacuten relativa en un plano obtenida mediante teacutecnicas multivariantes de ordenacioacuten de las especiesgrupos fauniacutesticos en relacioacuten con su utilizacioacuten de los diferentes tipos de pasos DA drenaje adecuado DC drenaje circular PIE paso inferior especiacutefico PIM paso inferior multifuncional PSE paso superior especiacutefico PSM paso superior multifuncional (Fuente figura adaptada de Mata 2007)

Figura 14 Jabaliacute (Sus scrofa) atropellado en la carretera N-110 (Aacutevila)

(Figura 15) La fauna que utiliza los diferentes tipos de pasos es distinta reflejando cierta relacioacuten directa entre el tamantildeo del animal y las dimensiones de las estructuras utilizadas (Veenbass y Brandjes 1999 Ng et al 2004 Mata et al 2005) Asiacute los drenajes son preferentemente utilizados por pequentildeos musteacutelidos anfibios reptiles y micromamiacuteferos (ratones musa-rantildeas y topillos) mientras que los pasos superiores e inferiores maacutes amplios son con mayor frecuencia

utilizados por musteacutelidos medianos como la garduntildea y el tejoacuten asiacute como por conejos y liebres jinetas zo-rros lobos y ungulados (jabaliacute corzo y ciervo)

Por otra parte la frecuencia relativa de uso de los diferentes tipos de estructuras es bastante similar con excepcioacuten de los drenajes de seccioacuten redonda que muestran iacutendices de uso inferiores al resto de tipos de paso (Figura 15)

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Figura 15 Utilizacioacuten relativa de cada tipo de estructura por la fauna representada mediante iacutendices de uso relativo (iacutendice de uso = 1 cuando la utilizacioacuten observada = utilizacioacuten esperada) Los resultados proceden del seguimiento de 113 estructuras de la autoviacutea A-52 DA drenaje adecuado DC drenaje circular n nuacutemero de estructuras controladas PIE paso inferior especiacutefico PIM paso inferior multifuncional PSE paso superior especiacutefico PSM paso superior multifuncional (Fuente figura adaptada de Mata 2007)

Una mencioacuten especial merecen los pasos especiacutefi-camente disentildeados o adaptados para la fauna ya que se ha comprobado su capacidad para facilitar el cruce de especies que no lo hacen por otras estructuras siendo especialmente llamativo para el caso de los ungulados Son numerosos los pro-gramas de seguimiento desarrollados en Espantildea en los que ha quedado reflejado el escaso nuacute-mero de registros obtenidos para estas especies que parecen cruzar de forma muy esporaacutedica las infraestructuras y que lo hacen de forma praacutectica-mente exclusiva a traveacutes de pasos especiacuteficamen-te disentildeados para la fauna (Rodriacuteguez et al 1996 Rosell et al 1997 Navas y Rosell 2002 Mata et al 2006 Llorente y Diacuteez 2008) Ademaacutes en teacuterminos generales se ha comprobado coacutemo la frecuencia de uso de los pasos especiacuteficos es entre 15 y 3 veces mayor en los de disentildeo especiacutefico para la fauna frente a los de tipo funcional de la viacutea de si-milar ubicacioacuten respecto a la infraestructura (Mata et al 2008)

En el contexto de la Peniacutensula Ibeacuterica mencioacuten especial requiere otra especie que se muestra renuente a utilizar los pasos de fauna la tortuga mora Por el momento en el uacutenico seguimiento realizado en una autoviacutea que atravesaba aacutereas con presencia de esta especie no se constatoacute ninguacuten cruce (Botella P comentario personal)

En su conjunto los resultados obtenidos hasta el momento indican que los pasos especiacuteficamente di-sentildeados para la fauna y las estructuras funcionales propias de la viacutea (drenajes puentes y pasos inferio-res) contribuyen a incrementar la permeabilidad de las infraestructuras manteniendo asiacute la conectividad del paisaje En concreto un elemento clave para ase-gurar el eacutexito de estas medidas es la incorporacioacuten de adaptaciones para favorecer su uso por la fauna en todas o buena parte de las estructuras funciona-les de una viacutea suponiendo un sobrecoste que debe ser contemplado como necesario e imprescindible si se pretende reducir la fragmentacioacuten de haacutebitats causada por las infraestructuras de transporte

V CONCLUSIONES Y PERSPECTIVAS

En conclusioacuten se puede decir que la restauracioacuten de las aacutereas afectadas por infraestructuras lineales enfocada a minimizar los efectos de la fragmenta-cioacuten de poblaciones animales se encuentra ya bas-tante consolidada y es relativamente exitosa No obstante pecariacuteamos de optimistas si obviaacuteramos la existencia de grandes vaciacuteos en el conocimiento del tema y nos conformaacuteramos con mantener el statu quo actual de conocimiento y actuacioacuten alcanzados tras poco maacutes de 10 antildeos desde la instalacioacuten de los primeros pasos de fauna en ecosistemas medi-terraacuteneos Ecosistemas que ocupan la mayor parte de la Peniacutensula Ibeacuterica y para los que hay escasas experiencias fuera de ella

Asiacute es necesario reconocer que el conocimiento cientiacutefico actual se centra en el uso de las estruc-turas por los vertebrados (y la impermeabilidad del vallado) pero apenas se ha podido analizar auacuten la efectividad real de dichas actuaciones sobre las po-blaciones animales La constatacioacuten de que cierto nuacutemero de individuos de cualquier especie cruza una infraestructura a traveacutes de los pasos de fau-na no asegura que dicho flujo sea suficiente para mantener a largo plazo la viabilidad de las pobla-ciones yo dinaacutemicas de colonizacioacuten-extincioacuten que permitan asegurar la restauracioacuten de una situacioacuten similar a la previa al proyecto (o cuando menos es-table a largo plazo) Es maacutes la praacutectica totalidad de los anaacutelisis realizados hasta el momento no han abordado la distincioacuten individual de los individuos detectados cruzando los ferrocarriles o carreteras lo que complica auacuten maacutes la evaluacioacuten de cuaacutel es la frecuencia de cruce que podriacutea considerarse miacutenima para asegurar la eficacia de la restauracioacuten Con esta perspectiva en los uacuteltimos tiempos se ha empezado a demandar un anaacutelisis detallado de los efectos po-sitivos de los pasos de fauna en el mantenimiento de la conectividad geneacutetica de las poblaciones (Ba-lkenhol y Waits 2009 Corlatti et al 2009) Sin em-bargo la relativa juventud de estas estructuras hace difiacutecil la deteccioacuten de efectos sobre la variabilidad geneacutetica y maacutes auacuten de cambios geneacuteticos con un reflejo directo en las probabilidades de superviven-cia de las poblaciones De hecho auacuten hoy son es-casos los estudios que demuestran la existencia de fragmentacioacuten geneacutetica de poblaciones asociada a la presencia de infraestructuras de transporte (Riley et al 2006 Malo y Mata 2010)

Desde una perspectiva maacutes amplia el objetivo a perseguir deberiacutea trascender el mantenimiento de

poblaciones estables para alcanzar el maacutes ambi-cioso (y difuso) de asegurar la restauracioacuten de las interacciones entre especies y el mantenimiento de unas lsquocondiciones ecoloacutegicas establesrsquo En una pri-mera aproximacioacuten se pretenderiacutea que las medidas de permeabilidad de las infraestructuras consiguie-ran eliminar la barrera que representa el proyecto y desapareciera todo efecto de fragmentacioacuten del ecosistema Este objetivo representa un nivel de am-bicioacuten de la restauracioacuten ecoloacutegica que trasciende el aproximado hasta el momento desde el punto de vista del conocimiento cientiacutefico y deberiacutea abordar-se desde el marco conceptual de la aparicioacuten de un lsquoecosistema emergentersquo en el entorno de la infraes-tructura lineal Este nuevo ecosistema nunca podraacute ser igual al preexistente en el lugar dado el cambio de condiciones que inevitablemente conlleva la pre-sencia y utilizacioacuten de la carretera o la viacutea feacuterrea

Todo ello deriva hacia el segundo gran tema y efec-to de las infraestructuras lineales sobre el territorio la degradacioacuten de haacutebitats Algunas investigaciones recientes muestran la aparicioacuten de efectos muacuteltiples en las poblaciones e interacciones entre especies en estos ecosistemas (pe Goerlitz y Siemers 2007 Francis et al 2009 Ruiz-Capillas et al 2009) que invitan a pensar en la inevitable degradacioacuten de su entorno No obstante partiendo de la necesidad de este tipo de infraestructuras puede ser maacutes uacutetil aproximarse al problema desde una perspectiva po-sitivista (o posibilista) reduacutezcanse los efectos nega-tivos y traacutetese de aprovechar los que puedan llegar a ser positivos En este contexto seriacutea necesario es-clarecer cuaacuteles son los principales cambios en estos ecosistemas emergentes a fin de detectar queacute actua-ciones pueden llevarse a cabo para que la presencia del ecosistema de entorno de la infraestructura en-torpezca en el menor grado posible el funcionamien-to de aquellos otros en los que se inserta

Mientras no dispongamos de un conocimiento ade-cuado para actuar proactivamente en la direccioacuten de manejar dicho ecosistema emergente el sentido comuacuten y la aplicacioacuten del principio de precaucioacuten debe servir para dirigir los esfuerzos encaminados a proteger la fauna afectada por nuestras infraes-tructuras En primer lugar se deben minimizar los efectos del desarrollo de nuevos proyectos tanto en el espacio como en el tiempo mediante una plani-ficacioacuten adecuada de las actuaciones y su ejecucioacuten con las teacutecnicas menos impactantes que resulten factibles Ademaacutes debe trabajarse para conseguir la

DC (n = 42) DA (n = 16) PIM (n = 21) PIE (n = 8) PSM (n = 22) PSE (n = 4)

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maacutexima integracioacuten del nuevo proyecto con el en-torno atendiendo tanto a la fauna como al resto de elementos del medio bioacutetico y abioacutetico que se tratan en este manual Y por uacuteltimo las actuacio-nes que se planteen deben disentildearse ejecutarse y mantenerse con una perspectiva temporal de largo plazo La experiencia proacutexima nos muestra la (des-graciada) frecuencia con la que se ponen en marcha iniciativas bien encaminadas que nunca alcanzan las metas propuestas Y no lo hacen porque el plazo en que estas se alcanzariacutean es muy superior al que tar-damos en hacerlas descarrilar por accioacuten u omisioacuten Asiacute ya se estaacuten dando casos en que estructuras di-sentildeadas para ejercer de pasos de fauna sabiamente ubicadas en supuestos corredores de fauna son re-convertidas como pasos de nuevas carreteras iquestTan necesarias eran dichas estructuras si apenas cinco antildeos despueacutes estamos dispuestos a eliminarlas

Para terminar y mirando hacia el futuro cabe plantearse una nueva cuestioacuten iquestqueacute ocurre con las infraestructuras antiguas Este es un tema

que empieza a plantearse y sobre el que algunos paiacuteses lsquoavanzadosrsquo han empezado a trabajar Tal y como se ha comentado la atencioacuten a los pro-blemas de fragmentacioacuten de poblaciones animales se ha desarrollado en las uacuteltimas deacutecadas y para entonces las redes baacutesicas de carreteras y ferro-carriles ya se encontraban construidas Aunque buena parte de ellas no estaba vallada el efecto de fragmentacioacuten que pueden estar ejerciendo auacuten no ha sido evaluado si bien podriacutea ser destaca-ble (Malo y Mata 2010) Ante esta situacioacuten paiacuteses con mayor experiencia en el desarrollo de infraes-tructuras de transporte (Estados Unidos Holanda) estaacuten iniciando ya programas de desfragmentacioacuten del territorio mediante la aplicacioacuten de teacutecnicas como las que se indicaban en los apartados ante-riores para proyectos nuevos En breve nuestras autoridades ambientales empezaraacuten a trabajar en ello y a largo plazo seraacute necesario invertir en ella el dinero que no se haya invertido acertadamente ahora Y se haraacute con el sobrecoste de toda actua-cioacuten a posteriori

INSECTOS

Este capiacutetulo de fauna recoge la problemaacutetica de los vertebrados un grupo fauniacutestico muy atrac-tivo pero minoritario Desgraciadamente ha quedado fuera el grupo de los invertebrados (in-sectos arantildeas lombrices caracoles etc) cuyo papel en el funcionamiento de los ecosistemas es cuantitativa y cualitativamente mucho ma-yor que el de los vertebrados Esta omisioacuten se debe en gran medida a que solo algunos grupos

nacionales desde fechas muy recientes trabaja en el aacutembito de invertebrados y carreteras no asiacute en otros paiacuteses como en el caso de Finlandia donde se han realizado diversos trabajos

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9Seguimiento y vigilancia ambiental

Carlos Iglesias Santiago Soliveres Valentiacuten Alfaya Jesuacutes Aacutelvarez Ignacio Mola Javier Martiacutenez de Castilla y Xavier Artigas

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CAPIacuteTULO 9 Seguimiento y vigilancia ambiental

Carlos Iglesias Santiago Soliveres Valentiacuten Alfaya Jesuacutes Aacutelvarez Ignacio Mola Javier Martiacutenez de Castilla y Xavier Artigas

I INTRODUCCIOacuteN Y ANTECEDENTES

1 Introduccioacuten y marco general

La vigilancia ambiental en proyectos de infraestruc-turas de transporte se enmarca generalmente en un escenario definido por la evaluacioacuten de impacto ambiental (EIA) de los mismos Salvo en aquellos casos en los que la construccioacuten de una infraestruc-tura nueva no queda sometida a este procedimiento bien porque no corresponda con los previstos en los anexos de la norma correspondiente o maacutes ex-cepcionalmente auacuten quede exenta por una ley del Estado o por un acuerdo del consejo de gobierno de una comunidad autoacutenoma en las situaciones en las que la competencia corresponda a estas uacuteltimas

En el actual marco legislativo los programas de vigi-lancia ambiental (PVA) son documentos de caraacutecter obligatorio dentro del procedimiento de EIA y han de servir para establecer el sistema que garantice el cum-plimiento de las indicaciones y medidas protectoras correctoras y compensatorias si proceden conteni-das en el estudio de impacto ambiental (EsIA) tanto en lo referente a su ejecucioacuten como a su eficacia

El oacutergano ambiental evaluacutea el EsIA del proyecto (en el caso de las infraestructuras de transporte suele coincidir con su fase de estudio informativo) tras haberse sometido a informacioacuten puacuteblica y formula la declaracioacuten de impacto ambiental (DIA) En caso de que la DIA sea positiva fija las condiciones de caraacutecter ambiental que deben incorporarse en la or-den de aprobacioacuten del proyecto traacutemite con el cual

concluye el procedimiento de EIA Estas condiciones suelen establecer medidas adicionales a las previs-tas en el EsIA

Tanto la DIA como el conjunto de documentacioacuten generada durante el procedimiento de EIA se con-vierten en piezas baacutesicas para la redaccioacuten del pro-yecto constructivo ya que debe contemplar lo que establecen e incluir un PVA que sirva para controlar la ejecucioacuten de las obras y al menos los primeros antildeos de funcionamiento

El seguimiento y vigilancia ambiental sin diferenciar entre ambos conceptos se trata en el Real Decreto Legislativo 12008 (BOE nordm 23 de 26 de enero de 2008) modificado por la Ley 62010 (BOE nordm 73 de 25 de marzo de 2010) como se reproduce en el Cua-dro 1 En el Capiacutetulo III dedicado al control del cum-plimiento de la DIA se conciben como la herramienta que permite verificar la aplicacioacuten de las medidas pre-ventivas correctoras y cuando proceda compensato-rias durante la ejecucioacuten y fase de explotacioacuten de un proyecto sometido al procedimiento de EIA

Cuadro 1 Seguimiento y Vigilancia en el RDL 12008

Artiacuteculo 18 Seguimiento y vigilancia del cumpli-miento de la DIA

1 Corresponde al oacutergano sustantivo o a los oacuterganos que en su caso designen las comunidades autoacutenomas respecto de los proyectos que no sean de competencia estatal el seguimiento y vigilancia del cumplimiento de la declaracioacuten de impacto ambiental Sin perjuicio de ello el oacutergano ambiental podraacute recabar informacioacuten de aquel al respecto asiacute como efectuar las comprobaciones necesarias para verificar el cumplimiento del condicionado

2 El oacutergano sustantivo comunicaraacute al oacutergano ambiental el comienzo y el final de las obras asiacute como el comienzo de la fase de explotacioacuten

En la actualidad la legislacioacuten baacutesica en materia de EIA sufre la paradoja de que el Reglamento que la desarrolla el RD 11311988 (BOE nordm 239 de 5 de octubre de 1988) es anterior al RDL 12008 y a la Ley 62010 de modificacioacuten del texto refundido de la Ley de Evaluacioacuten de Impacto Ambiental de pro-yectos aprobado por el citado RDL 12008

La lectura del RD 11311988 permite observar que tampoco en este caso se diferencia entre las ta-reas de seguimiento y vigilancia aunque los ob-jetivos de esta uacuteltima tratan de forma especiacutefica de

1 Velar para que en relacioacuten con el medio am-biente la actividad se realice seguacuten el proyec-to y seguacuten las condiciones en que se hubiere autorizado

2 Determinar la eficacia de las medidas de pro-teccioacuten ambiental contenidas en la declara-cioacuten de impacto

3 Verificar la exactitud y correccioacuten de la evalua-cioacuten de impacto ambiental realizada

Debido a la organizacioacuten administrativa del Estado algunas comunidades autoacutenomas han establecido en sus respectivas normas que el desarrollo de la vigilancia ambiental seraacute responsabilidad de la consejeriacutea competente en materia de medio am-biente como en los casos de Andaluciacutea y Madrid Circunstancia que ha obligado a matizar la redac-cioacuten del artiacuteculo 18 punto 1 del RDL 12008 res-pecto a lo que se contemplaba en el artiacuteculo 25 punto 1 del RD 11311988 (Cuadro 2) auacuten vigente salvo en los aspectos que contradiga al primero y su posterior modificacioacuten No obstante en la ma-yoriacutea de comunidades autoacutenomas como Canarias Castilla-La Mancha Castilla y Leoacuten Cataluntildea Ga-licia etc se ha trasladado el esquema baacutesico de funcionamiento del Estado siendo la verificacioacuten del cumplimiento de la DIA competencia del oacutergano sustantivo sin perjuicio de la facultad del oacutergano ambiental para recabar la informacioacuten que requiera para verificar dicho cumplimiento aunque tambieacuten el desarrollo legislativo ha dado lugar a la creacioacuten de diferentes procedimientos de autorizacioacuten am-biental de proyectos y actividades en algunas auto-nomiacuteas que en funcioacuten de sus caracteriacutesticas o las del emplazamiento del proyecto pueden ocasionar que dicha responsabilidad recaiga sobre el oacutergano sustantivo o sobre el oacutergano ambiental como por ejemplo sucede en Aragoacuten en funcioacuten del tipo de tramitacioacuten que corresponda

Un caso maacutes singular de funcionamiento es el de las Islas Baleares donde su legislacioacuten establece que en funcioacuten del importe del presupuesto del proyec-to o la concurrencia de circunstancias que lo justi-fiquen dicha responsabilidad puede recaer directa-mente sobre una auditoriacutea externa contratada por el propio promotor

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Cuadro 2 Vigilancia y responsabilidad (RD 11311988)

Artiacuteculo 25 Oacuterganos que deben hacerla1 Corresponde a los oacuterganos competentes por razoacuten de la materia facultados para el otorga-miento de la autorizacioacuten del proyecto el segui-miento y vigilancia del cumplimiento de lo esta-blecido en la declaracioacuten de impacto ambiental Sin perjuicio de ello el oacutergano administrativo de medio ambiente podraacute recabar informacioacuten de aquellos al respecto asiacute como efectuar las comprobaciones necesarias para verificar dicho cumplimiento2 El seguimiento y vigilancia por los oacuterganos que tengan competencia sustantiva deben ha-cer posible y eficaz los que ejerzan los oacuterganos administrativos de medio ambiente que podraacuten alegar en todo momento el necesario auxilio administrativo tanto para recabar informacioacuten como para efectuar las comprobaciones que consideren necesarias

Artiacuteculo 26 Objetivos de la vigilanciaLa vigilancia del cumplimiento de lo estableci-do en la declaracioacuten de impacto tendraacute como objetivos a Velar para que en relacioacuten con el medio am-

biente la actividad se realice seguacuten el proyec-to y seguacuten las condiciones en que se hubiere autorizado

b Determinar la eficacia de las medidas de pro-teccioacuten ambiental contenidas en la declara-cioacuten de impacto

c Verificar la exactitud y correccioacuten de la evalua-cioacuten de impacto ambiental realizada

Debido al uso frecuente de acroacutenimos en la materia tratada en este capiacutetulo antes de finalizar el aparta-do de introduccioacuten se considera conveniente incluir el siguiente cuadro resumen

Cuadro 3 Resumen de siglas y acroacutenimos

CMCC Comisioacuten Mixta de Concertacioacuten y Control

DAO Direccioacuten ambiental de obra

DIA Declaracioacuten de impacto ambiental

EIA Evaluacioacuten de impacto ambiental

EsIA Estudio de impacto ambiental

I+D+i Investigacioacuten + Desarrollo + innovacioacuten

PAC Programa de aseguramiento de la calidad

PEM Presupuesto de ejecucioacuten material

PPI Programa de puntos de inspeccioacuten

PS Programa de seguimiento

PVA Programa de vigilancia ambiental

2 Objeto y alcance del capiacutetulo

El presente capiacutetulo pretende no solo establecer las pautas lsquoteacutecnicasrsquo de seguimiento de las distintas varia-bles y elementos ambientales sino tambieacuten proponer un marco maacutes ambicioso para la articulacioacuten de los programas de vigilancia ambiental en proyectos de infraestructuras a partir de las deficiencias habitual-mente detectadas Una articulacioacuten que entre otros objetivos permita aclarar las responsabilidades de los distintos agentes y facilitar que los responsables de cada fase doten los recursos necesarios para una aplicacioacuten eficiente de los programas de vigilancia en obra y seguimiento a largo plazo

Por un lado se entiende que un factor clave para poder implementar un PVA en obra seriacutea que este se iniciase con una revisioacuten exhaustiva del proyecto y la constatacioacuten en campo de la idoneidad de las medidas previstas siempre guiado por el objetivo de buscar los errores defectos y omisiones que el proyecto pudiera tener En este sentido es necesario contemplar protocolos para la definicioacuten de nuevas medidas correctoras ya que asiacute se consigue mante-ner la idea de que el PVA no es un documento ce-rrado durante la ejecucioacuten de las obras de la misma manera que el propio proyecto puede sufrir profun-das modificaciones de aspectos tan relevantes como el trazado enlaces situacioacuten de estructuras etc De este modo en el caso de detectarse alguna caren-cia en los estadiacuteos iniciales la direccioacuten facultativa dispondriacutea de un margen superior de tiempo para reconducir situaciones adversas y adoptar las medi-das que se consideraran oportunas por la asistencia teacutecnica (Gil Esteban 2006)

Por todo ello el objetivo fundamental que tiene este capiacutetulo es proponer un escenario compatible con la legislacioacuten vigente que permita potenciar el papel del seguimiento y la vigilancia ambiental de los proyectos y actividades sometidas a EIA par-ticularmente los de infraestructuras de transporte asiacute como resaltar su complementariedad con los procesos de aseguramiento de la calidad que rea-lizan algunos actores que participan en distintas

fases de su ciclo de vida con el fin uacuteltimo de fo-mentar la retroalimentacioacuten del sistema por medio de un protocolo de funcionamiento basado en la creacioacuten de comisiones multidisciplinares que per-mita exponer y consolidar el conocimiento emana-do de la experiencia acumulada por los antildeos de implantacioacuten de la EIA en Espantildea dado que en la actualidad en todos los aacutembitos afectados se considera deficiente Para lograrlo es necesario di-ferenciar el papel y el significado del seguimiento y la vigilancia contemplados en el actual Reglamento de EIA (RD 1131988) y desarrollar los contenidos y actores intervinientes en cada fase de acuerdo con la distincioacuten baacutesica que se presenta en el Cuadro 5

3 Los PVA en el marco legal Vinculacioacuten con la DIA y el proyecto

Los PVA habitualmente se incorporan al proyecto de construccioacuten en el caso de las infraestructuras de transporte como un capiacutetulo del anejo de Integracioacuten Ambiental (a veces denominado lsquoOrdenacioacuten ecoloacutegi-ca esteacutetica y paisajiacutesticarsquo o similar) en el que se parti-cularizan las medidas disentildeadas atendiendo al condi-cionado de la DIA

Esta disposicioacuten en el Proyecto hace que en oca-siones tanto el anaacutelisis del cumplimiento de la DIA como el disentildeo del PVA se perciban como un tema exclusivamente ambiental reducieacutendose la participacioacuten en su disentildeo y en el de las medidas correctoras de otros teacutecnicos involucrados en la redaccioacuten de los proyectos como podriacutean ser quie-nes elaboran los anejos de geologiacutea geotecnia hidrologiacutea y drenaje etc Por otro lado la misma circunstancia hace que aspectos relevantes de es-tos apartados se diluyan entre los varios centena-res de paacuteginas que pueden ocupar los anejos de integracioacuten ambiental dado el amplio espectro de variables que se tratan en ellos

La aplicacioacuten de estos programas se realiza de ma-nera maacutes o menos exhaustiva durante la construc-cioacuten de la obra con notables diferencias de unos casos a otros pero en general no trasciende al pla-zo de garantiacutea de la misma (normalmente los dos antildeos posteriores a la finalizacioacuten de los trabajos) Por otro lado la dispersioacuten de la informacioacuten en-tre administraciones entre el oacutergano sustantivo y el ambiental asiacute como los dispares procedimientos de adjudicacioacuten de estos trabajos no permiten el acce-so a los resultados consolidaacutendose una situacioacuten de desconocimiento bastante generalizada sobre la consistencia de los PVA y su aplicacioacuten real

Figura 1 Ejemplos contrapuestos sobre la proteccioacuten de pies arboacutereos en distintas obras En la imagen superior se ilustra la ausencia de protecciones (Foto Xavier Artigas) y en la inferior cada ejemplar arboacutereo se encuentra protegido por un cerramiento riacutegido a su vez recubierto por telas que incrementan su visibilidad

En este sentido llama poderosamente la atencioacuten los resultados de una investigacioacuten de Arce et al (2006) basada en un cuestionario remitido a em-presas constructoras y consultoras de Ingenieriacutea en el que un 64 de las primeras manifiesta que siacute se realiza alguacuten tipo de control de las medidas preven-tivas y correctoras mientras que entre las empresas consultoras tan solo responde afirmativamente un

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36 Esto quiere decir que un aspecto fundamental del proyecto desde el punto de vista de su apro-bacioacuten ambiental se ha ignorado sistemaacuteticamente en fase de obras (seguacuten reconoce un tercio de las empresas constructoras y sospechan dos tercios de las empresas redactoras de proyectos)

Es decir en general durante mucho tiempo se ha venido consintiendo una situacioacuten irregular respec-to a la disciplina ambiental es decir la vigilancia y el seguimiento su cumplimiento y la imposicioacuten de sanciones cuando proceda No obstante con el tiem-po tambieacuten se van conociendo iniciativas realmente interesantes para la aplicacioacuten de estos PVA que maacutes adelante se comentaraacuten

Cuadro 4 Principales problemas para la implementacioacuten de los PVA

- Los recursos que se requieren para ejecutar con solvencia el PVA en general no se pre-supuestan con el detalle que corresponderiacutea a cualquier medida que se define en la fase de redaccioacuten de proyecto En ocasiones el contra-tista principal de la obra acaba asumiendo una parte de estos costes

- No existe un seguimiento a maacutes largo plazo de las medidas aplicadas y los aspectos ambien-tales que podriacutea ser fundamental para recabar informacioacuten valiosa sobre la verdadera efecti-vidad de las medidas de revegetacioacuten protec-cioacuten de la fauna etc

- En la praacutectica se diluyen las responsabilidades entre los agentes implicados (promotor oacutergano sustantivo oacutergano ambiental asistencia teacutecni-ca direccioacuten facultativa contratista operador o concesionariohellip) en relacioacuten con la aplicacioacuten de los programas de vigilancia y seguimiento

- El dispar tratamiento de los PVA en fase de pro-yecto (unas veces incluidos en el presupuesto de ejecucioacuten material otras en el de inversioacuten en ocasiones ausentes etc) no contribuye a clarificar las responsabilidades menos auacuten cuando el esquema de participacioacuten se vuelve algo maacutes complejo de lo habitual

Figura 2 En la imagen superior tiacutepico cartel que anuncia unas obras y pide disculpas a los usuarios por las molestias ocasio-nadas durante las mismas que permanece por tiempo indefinido durante la fase de explotacioacuten En la imagen inferior unas panta-llas acuacutesticas tiacutepica medida correctora de impacto ambiental cuya eficacia no podraacute ser verificada hasta la puesta en servicio de la infraestructura (Foto Carlos Iglesias)

Las principales etapas del ciclo de vida de una infra-estructura lineal se resumen en la Figura 3

Estudio baacutesicoEstudio de trazado

Elaboracioacuten delproyecto de

construccioacuten

Ejecucioacuten(construccioacuten)+ garantiacutea

Elaboracioacuten delproyecto baacutesico

EIA

Incorporacioacutenrequisitos DIA

ElaboracioacutenPVA

Operacioacutenconservacioacuten y mantenimiento

Demolicioacuten o deconstruccioacuten

Vigilanciaambiental

Seguimiento alargo plazo

PreliminarPVA

Figura 3 Esquema habitual de la EIA en Espantildea en relacioacuten con los proyectos de las infraestructuras de transporte

Como es sabido la DIA cuando es positiva cons-tituye la autorizacioacuten de la obra a los efectos am-bientales e incluye buena parte de los requisitos que en esta materia seraacuten aplicables Entre otros las condiciones del trazado las principales medidas preventivas y compensatorias los criterios para el disentildeo de las medidas correctoras y en particular los objetivos y exigencias de la vigilancia ambiental

Dichos aspectos sin embargo no siempre son faacuteci-les de trasladar a los PVA debido entre otras cosas a que la fase en que se evacua la DIA es auacuten muy temprana en el disentildeo del proyecto En ese momen-to es difiacutecil tener una idea clara de cuaacuteles van a ser las variables ambientales o las medidas correctoras que requeriraacuten un mayor esfuerzo de monitorizacioacuten en las fases de construccioacuten y operacioacuten

Para orientar la consecucioacuten de los objetivos ex-puestos en este capiacutetulo hacia todas las fases del ci-clo de vida de una infraestructura de transporte y en general de cualquier otro tipo de proyecto sometido a EIA se parte inicialmente de la idea de incluir un anejo especiacutefico en el proyecto por ejemplo deno-minado lsquoCumplimiento de la DIA y vigilancia y segui-miento ambientalrsquo puesto que el cumplimiento del condicionado de la DIA empieza en fase de proyecto afecta a todos sus anejos y se prolonga en obra y durante la fase de explotacioacuten

Este anejo deberiacutea ser coordinado por el autor del proyecto y exclusivamente dedicado a justificar coacutemo

se cumple la DIA en los distintos documentos de un proyecto dado que la definicioacuten de muchas de estas medidas es ajena al anejo de integracioacuten ambiental y contribuiriacutea a implicar al conjunto de los teacutecnicos que participan en la redaccioacuten de un proyecto bajo la responsabilidad de quienes poseen la capacidad de firmarlo Se favoreceriacutea asiacute la coordinacioacuten de un escenario de trabajo efectivamente pluridisciplinar en el que las posibles incoherencias del proyecto se pondriacutean de manifiesto y cada redactor de un ane-jo percibiriacutea la influencia de su trabajo sobre otros apartados Finalmente cuando se iniciara la fase de obras se facilitariacutea el conocimiento de los detalles concretos que afectan a los aspectos de la vigilancia y del seguimiento ambiental respecto a la situacioacuten actual que obliga a indagar entre las decenas de anejos de un proyecto y los centenares de paacuteginas de algunos de ellos

Otro de los objetivos fundamentales de este capiacutetulo del libro reside en la necesidad de homogeneizar y poner de relieve el valor de las tareas de seguimien-to y vigilancia ambiental en obra y durante la fase de explotacioacuten de las infraestructuras de transpor-te poniendo de manifiesto el significado de ambos conceptos y la existencia en ocasiones de activida-des duplicadas que se desarrollan de manera para-lela por diferentes actores sin que exista un flujo de informacioacuten coherente que sirva al sistema para aclarar el estado de conocimiento en las materias en cuestioacuten ni mucho menos conocer los resultados correspondientes a experiencias anteriores

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Cuadro 5 Distincioacuten baacutesica entre vigilancia ambiental y seguimiento ambiental y objetivos fundamentales

1 Vigilancia ambiental fundamentalmente de caraacutecter teacutecnico antes y durante la ejecucioacuten de las obras estariacutea centrada en

bull Detectar y corregir posibles deficiencias del proyecto de construccioacuten

bull Verificar la adecuacioacuten de las medidas proyectadas a la realidad final de la obra

bull Supervisar la correcta ejecucioacuten de las medidas ambientales (pantallas acuacutesticas revegetacioacuten pasos de fauna etc)

bull Controlar los aspectos ambientales relevantes de la obra (pe seguimiento de la calidad de las aguas superficiales afecciones a los haacutebitats silvestres emisiones atmosfeacutericas etc) Y deteccioacuten de impactos no previstos anteriormente

bull Determinar la posible supresioacuten modificacioacuten o introduccioacuten de nuevas medidas preventivas y correctoras conforme al protocolo que contemple el propio pva en ausencia de normas especiacuteficas al respecto

2 Seguimiento ambiental a medio y largo plazo (orientativamente de 3 a 10 antildeos) desde el momento de recepcioacuten de la obra y posteriormente tambieacuten adquiririacutea un sentido cientiacutefico y se centrariacutea en

bull Verificar la evolucioacuten de las medidas implantadas (pe Revegetacioacuten uso de pasos de fauna etc) Para evaluar su eficacia a medio y largo plazo

bull Recabar informacioacuten sobre los impactos de la infraestructura en el medio ambiente (pe Efecto barrera) y la posible aparicioacuten de otros no previstos

bull Informar y servir de input para futuros proyectos en el marco de una continua mejora del procedimiento de eia y de la prevencioacuten y correccioacuten de impactos ambientales en particular

PromotorRedaccioacuten del EsIA (y PVA)Explotacioacuten de la infraestructura

Oacutergano ambiental DIA

Oacutergano sustantivo Vigilancia y seguimiento

Figura 4 Esquema habitual del papel de los oacuterganos ambiental y sustantivo en el modelo de EIA en Espantildea (diferente en algunas comuni-dades autoacutenomas) En el caso de las infraestructuras de transporte suele coincidir que el promotor es a la vez oacutergano sustantivo

II CONTEXTO GENERAL DE LOS PVA EXPECTATIVAS Y DEFICIENCIAS

1 Los PVA en el contexto del ciclo de vida de la infraestructura Agentes implicados

El RDL 12008 establece que corresponde al oacutergano sustantivo (en el caso de infraestructuras de trans-porte puede ser el Estado las autonomiacuteas o incluso algunas diputaciones) el seguimiento y vigilancia del cumplimiento de la DIA o a los oacuterganos que en su caso designen las comunidades autoacutenomas respec-to de los proyectos que sean de su competencia Al situarse en un estatus cuanto menos confuso seguacuten las casuiacutesticas posibilitadas por el tipo de proyecto y las administraciones competentes en la praacutectica la vigilancia queda desligada en cierto modo de la evaluacioacuten puesto que el PVA se redacta en fase de proyecto (dada la escasa definicioacuten posible en el EsIA) lo cual no significa que sea una medida maacutes a ejecutar por el contratista de las obras puesto que este no deberiacutea vigilarse a siacute mismo De estas

consideraciones deriva tambieacuten la conveniencia de segregar del anejo de integracioacuten ambiental el PVA y el programa de seguimiento que maacutes adelante se trata junto con la justificacioacuten de coacutemo el proyecto cumple las condiciones de la DIA ya que las me-didas preventivas y correctoras definidas en dicho anejo siacute corresponde ejecutarlas al contratista En la praacutectica esta circunstancia se resuelve la mayoriacutea de las veces mediante una asistencia teacutecnica a la direccioacuten de obra frecuentemente asumida por la misma asistencia que verifica la ejecucioacuten del pro-yecto lo cual no impide que la empresa constructora realice simultaacuteneamente en el marco de su propio programa de aseguramiento de la calidad (PAC) al-gunas actividades que en ocasiones se solapan con la propia vigilancia ambiental

La legislacioacuten baacutesica tambieacuten establece claramen-te que el oacutergano ambiental podraacute recabar infor-macioacuten del oacutergano sustantivo asiacute como efectuar las comprobaciones necesarias para verificar el cumplimiento de la DIA tanto en fase de obras como de explotacioacuten A raiacutez de estos supuestos algunas comunidades autoacutenomas han otorgado mayores competencias al oacutergano ambiental asig-naacutendoles las funciones de vigilancia ambiental como en el ya citado caso de la Comunidad de Madrid (Ley 22002 BOCM nordm 154 de 1 de julio de 2002)

Otro aspecto que indudablemente podriacutea contri-buir a la mejora del funcionamiento de los actua-les modelos seriacutea la clasificacioacuten en funcioacuten de sus capacidades de las entidades y profesionales implicados en tareas de vigilancia y control am-biental de obras y de seguimiento de la eficacia de las medidas correctoras

En este sentido destaca el caso de la Junta de Comunidades de Castilla-La Mancha donde existe un Registro de Entidades y Profesionales Autoriza-dos para el seguimiento y control de actividades sometidas a EIA regulado por la Orden de 26-01-2005 de la Consejeriacutea de Medio Ambiente (DOCM nordm 24 de 3 de febrero de 2005) De esta manera se atribuye a estas entidades la responsabilidad sobre el contenido de los informes realizados que deben presentarse tras cada actuacioacuten en la

delegacioacuten provincial correspondiente de la Con-sejeriacutea de Medio Ambiente Las entidades y profe-sionales interesados se pueden acreditar hasta en ocho aacutembitos funcionales (Cuadro 6) en funcioacuten de sus recursos teacutecnicos

Se trata de una estructura organizativa bastante acertada para establecer las bases de una vigilan-cia y un seguimiento ambiental que deben evo-lucionar hacia la integracioacuten efectiva de especia-listas en cada variable a controlar Sin embargo resulta ser un planteamiento inviable mientras los PVA no se presupuesten de manera detallada Es loacutegico pensar que cualquier medida o actividad que represente un coste imprevisto no seraacute asu-mida por ninguacuten agente por lo que los recursos humanos y materiales necesarios para cualquier tarea de seguimiento ambiental deberiacutea valorarse a la vez que se define el PVA e incluirse en el presupuesto de inversioacuten (antes denominado para conocimiento de la administracioacuten) En ninguacuten caso debe incluirse en el presupuesto de ejecu-cioacuten material (PEM) puesto que no corresponde al contratista de la obra su ejecucioacuten y posible-mente su duracioacuten exceda a la de la obra y a la del periacuteodo de garantiacutea de la misma La existencia de un cuadro de precios para cada actividad de vigilancia y seguimiento asiacute como su descomposi-cioacuten permitiriacutea conocer al promotor el presupues-to que debe disponer para realizar la vigilancia y el seguimiento ambiental

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IacuteNDICE

Cuadro 6 Grupo de actividades para el que se solici-ta acreditacioacuten en el Registro de Entidades y Profesionales autorizados para el segui-miento y control de actividades sometidas a EIA en Castilla-La Mancha

1- Flora y vegetacioacuten

2- Fauna

3- Paisaje

4- Agua

5- Gea y suelo

6- Atmoacutesfera

7- Patrimonio histoacuterico artiacutestico y arqueoloacutegico y paleontoloacutegico

8- Ser humano relaciones asociales y condiciones de sosiego puacuteblico

Por supuesto teniendo en cuenta el modelo que maacutes adelante se presenta la valoracioacuten econoacutemica del PVA no deberiacutea incluirse en el presupuesto de ejecucioacuten material del proyecto puesto que en nin-guacuten caso deberiacutea realizarlo el contratista construc-tor Esta obviedad debido al escaso desarrollo de algunos aspectos confusos de la legislacioacuten y so-bre todo las particularidades propias de cada tipo de proyecto lleva a poner de relieve la importancia de la disposicioacuten adicional segunda del RDL 12008 Dicha disposicioacuten adicional habilita al Gobierno en el aacutembito de sus competencias para el desarrollo reglamentario de la Ley en particular para aprobar normas baacutesicas mediante real decreto sobre aque-llos aspectos de caraacutecter teacutecnico o de naturaleza coyuntural y cambiante necesarios para asegurar el miacutenimo comuacuten denominador establecido en la Ley Sin lugar a dudas la vigilancia ambiental es un aspecto muy concreto de la evaluacioacuten ambien-tal que necesita un desarrollo particularizado para cada tipo de proyecto o actividad desde hace mu-cho tiempo

2 Las comisiones mixtas como mecanismo de refuerzo y control

En el caso de Cataluntildea en el texto de las propias DIA se establece como una condicioacuten maacutes al proyec-to la necesidad de formalizar una Comisioacuten Mixta de Concertacioacuten y Control (CMCC) entre el oacutergano ambiental y el oacutergano sustantivo con la finalidad de controlar el contenido periodicidad aplicacioacuten eacutepoca de realizacioacuten de las medidas correctoras y de proteccioacuten que sentildeala la DIA

PROMOTOR OacuteRGANO SUSTANTIVO

OacuteRGANO AMBIENTAL

DIRECCIOacuteN DE OBRA

CONTRATISTA

DIRECCIOacuteN AMBIENTAL DE OBRA

Figura 5 La composicioacuten de la Comisioacuten Mixta de Concertacioacuten y Control (CMCC) estaacute formada como miacutenimo por el promotor el oacutergano sustantivo y el oacutergano ambiental Ademaacutes suelen incorpo-rarse las figuras del director de obra jefe de obra de la empresa adjudicataria y la direccioacuten ambiental de obra (DAO)

Esta CMCC permite al oacutergano ambiental realizar un seguimiento a pie de obra del desarrollo de la mis-ma de forma que contribuye a la correcta ejecucioacuten de las medidas contempladas asiacute como en su defi-nicioacuten cuando resulta preciso hacerlo durante la fase de obras

De la misma forma cualquier modificacioacuten sustan-cial del proyecto que haya de someterse a valoracioacuten se dirime inicialmente en el seno de la CMCC El promotor aporta los datos necesarios y justificati-vos del cambio solicitado junto con una valoracioacuten ambiental y definicioacuten del grado de adecuacioacuten con la DIA realizada por la direccioacuten ambiental de obra (DAO) La CMCC se pronuncia sobre la modificacioacuten y propone al oacutergano ambiental la tramitacioacuten a seguir e informa sobre el cambio solicitado

CMCC PROMOTOR (Consulta)

DECISIOacuteN

DAO (Informe)

Figura 6 Esquema de funcionamiento de la CMCC ante la consulta del promotor sobre una modificacioacuten sustancial del proyecto

Las funciones asiacute estaacuten repartidas claramente de acuerdo con la legislacioacuten el oacutergano ambiental realiza la evaluacioacuten ambiental y establece las medidas el promotor del proyecto es el respon-sable de incorporar las medidas que establece la DIA y el oacutergano sustantivo es el responsable tan-to de hacerlas cumplir como de su seguimiento y

vigilancia La CMCC uacutenicamente supervisa su cum-plimiento y facilita la relacioacuten entre los distintos actores

En todo caso en este esquema la DAO es respon-sable de la aplicacioacuten del PVA desde las fases ini-ciales y previas a la ejecucioacuten del proyecto hasta la finalizacioacuten siendo sus funciones principales las habituales de la vigilancia ambiental El uacutenico cam-bio reside en la existencia de un marco formal de funcionamiento que compensa la debilidad habi-tual de la DAO en escenarios en los que quedariacutea relegada a un segundo plano entre los actores im-plicados

Cuadro 7 Funciones habituales de la DAO

bull Verificar que se cumplen los condicionantes impuestos por la DIA y se ejecutan las medi-das proyectadas

bull Supervisar la ejecucioacuten de las medidas preventi-vas correctoras y compensatorias previstas asiacute como el cumplimiento de aquellas medidas nue-vas aprobadas por la CMCC

bull Planificar y verificar los sistemas de control propuestos en el PVA y realizar los controles

bull Identificar y valorar impactos ambientales residuales o no previstos en el EIA y propo-ner nuevas medidas para minimizar o corre-gir los impactos de forma adecuada

bull Valorar la eficacia de las medidas ejecuta-das respecto a los objetivos ambientales y el grado de correccioacuten en la valoracioacuten del impacto

bull Asesorar al contratista durante la ejecucioacuten de la obra para la correcta aplicacioacuten de las medidas establecidas asiacute como sobre la tra-mitacioacuten de los permisos necesarios

bull Redactar los informes de seguimiento para el oacutergano sustantivo y oacutergano ambiental

bull Redactar y asumir la direccioacuten obra del pro-yecto de medidas correctoras

bull Mantener la coordinacioacuten con la direccioacuten de obra

Indicar por uacuteltimo que en el marco de una CMCC con encuentros regulares durante la ejecucioacuten de las obras es maacutes faacutecil motivar al contratista para la realizacioacuten en tiempo y forma de los diferen-tes traacutemites de caraacutecter ambiental que puedan precisarse

Cuadro 8 Traacutemites entre otros a los que queda obli-gado el contratista para la correcta ejecu-cioacuten del PVA

bull Proporcionar la informacioacuten sobre la forma de ejecucioacuten y materiales utilizados durante la ejecucioacuten de unidades de obra con posibles implicaciones ambientales

bull Facilitar las muestras o el acceso a ellos que se determinen en el PVA

bull Documentar la gestioacuten de residuos

bull Aportar los certificados de calidad de los diferentes materiales utilizados en sus actuaciones (pe la restauracioacuten vegetal)

bull Obtener cuantos permisos de caraacutecter ambiental vertederos vertidos de aguas preacutestamos etc precise

3 Situacioacuten actual de la vigilancia ambiental en relacioacuten con el control de calidad

En la actualidad la vigilancia ambiental queda en-marcada durante la ejecucioacuten de las obras en el con-trol de calidad de las mismas existiendo el riesgo de que se convierta en un formalismo a modo de repa-so de una lista de comprobaciones y la supervisioacuten de autorizaciones dejando de lado la comprobacioacuten de la efectividad de las medidas

Un aspecto importante que hay que considerar es la posibilidad de que la DAO esteacute desligada de la direc-cioacuten de obra lo cual no impide que sus funciones es-teacuten claras y coordinadas con ella Este esquema que a priori puede generar cierta inquietud tendriacutea mejor adaptacioacuten a los recursos realmente disponibles para dichas labores permitiendo una mayor especializa-cioacuten de las funciones ambientales y un mayor grado de control para la correcta ejecucioacuten del PVA

Un ejemplo eficaz de esta adaptacioacuten se encuen-tra reproducido en el modo en que el Administra-dor de Infraestructuras Ferroviarias (ADIF) desa-rrolla la gestioacuten ambiental de las obras de alta velocidad en Espantildea Para ello mediante un pro-cedimiento interno de gestioacuten y coordinacioacuten de actividades ambientales atribuye a la Direccioacuten de Medio Ambiente la responsabilidad del control y vigilancia ambiental de las obras Esta Direc-cioacuten es dependiente de la Direccioacuten de Calidad y Medio Ambiente dentro de la DG de Organiza-cioacuten Seguridad y Recursos Humanos de ADIF Es

Direccioacuten de obra

Comisioacuten Mixta de Concertacioacuten y

Control (CMCC)

Promotor

Contratista

Direccioacuten ambientalde obra

Oacutergano ambiental

Oacutergano sustantivo

DecisioacutenPromotor (Consulta)

DAO(Informe)

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decir la vigilancia y el seguimiento ambiental y por tanto la responsabilidad de certificar el cum-plimiento de la DIA en obra recae en un aacuterea di-ferente de la que dirige la ejecucioacuten de las obras con el objetivo de garantizar la independencia en el proceso (Matas 2008)

Direccioacuten de Calidad y Medio Ambiente

DIRECCIOacuteN AMBIENTAL DE OBRA

DG Grandes Proyectos de Alta Velocidad

DG Desarrollo de la Infraestructura

DG Explotacioacuten de la Infraestructura

PROYECTOS Y EsIADIRECCIOacuteN

FACULTATIVAEXPLOTACIOacuteN

Presidencia

D Comunicacioacuten y Relaciones Externas

Secretariacutea General y del Consejo

DG Seguridad Organizacioacuten y RR HH

DG Planificacioacuten Estrateacutegica

DG Econoacutemico Financiera y de Control

Direcciones de Liacutenea de Alta Velocidad

Figura 7 Esquema simplificado de la asignacioacuten de las responsabilidades de direccioacuten facultativa y DAO en diferentes direcciones generales de ADIF

En este caso la DAO suele recaer sobre una asistencia teacutecnica que supervisa la ejecucioacuten de tres o cuatro tra-mos consecutivos en coordinacioacuten con la direccioacuten fa-cultativa a pie de obra A su vez las diferentes DAO de una liacutenea completa estaacuten coordinadas por teacutecnicos es-pecialistas de la Direccioacuten de Medio Ambiente de ADIF

El anterior esquema de funcionamiento interno cons-tituye un enfoque ambicioso y novedoso en cuanto al compromiso por parte del promotor y oacutergano sus-tantivo en este caso se refiere puesto que impide que una direccioacuten general se certifique a siacute misma el cumplimiento de la DIA Por otro lado las mejoras introducidas a partir de los resultados que con el tiempo se van obteniendo empiezan a ser recono-cidas en el sector y a emplearse como referencias incluso para otros proyectos

Sin embargo volviendo sobre los austeros escena-rios maacutes habituales de la vigilancia ambiental en Espantildea la ausencia de un programa de seguimiento durante la fase de explotacioacuten de las infraestructuras no permite obtener datos concluyentes del grado de eficiencia de las medidas preventivas correctoras y compensatorias aplicadas durante la construccioacuten Esta deficiencia histoacuterica provoca una carencia de

informacioacuten para la elaboracioacuten de los EsIA con-solidando la redaccioacuten de medidas estaacutendar cuya eficiencia es teoacuterica pero no universal

El desarrollo de programas de seguimiento (PS) permitiriacutea evaluar la eficacia de las medidas pro-yectadas asiacute como la posibilidad de modificarlas en caso de necesidad o disponer la ejecucioacuten de medidas adicionales en caso de preverse o de-tectarse nuevos impactos durante los trabajos de mantenimiento de la infraestructura Otro aspecto que se percibe de manera generalizada entre los distintos agentes implicados es que determinados trabajos de mantenimiento pueden impedir el co-rrecto funcionamiento de alguna medida correctora y viceversa Sin embargo la ausencia de evidencias documentadas resulta alarmante despueacutes de tantos antildeos de desarrollo de nuestra red de infraestructu-ras de transporte

Figura 8 Dispositivos de escape para fauna mal ejecutados como consecuencia de una vigilancia ambiental deficiente o a la que no se le reconoce autoridad El primer dispositivo estariacutea constituido por un muro inexistente y una rampa de tierra inacabada (Foto TEG-UAM) El segundo por un portillo abatible que al estar su base enterrada no se puede abrir (Foto Carlos Iglesias)

Debe tenerse en cuenta que la fase de explotacioacuten puede ser administrativamente tan compleja o maacutes que la fase de construccioacuten y que la aparicioacuten de nuevos actores mediante diferentes foacutermulas de con-cesioacuten puede generar una casuiacutestica sin fin En todo

caso conviene que los efectos de caraacutecter ambiental se monitoricen por medio de un programa que cubra esta fase desde el momento en que se recibioacute la obra cuya realidad diferiraacute por completo de la que se daba durante la construccioacuten

III PROGRAMA DE VIGILANCIA AMBIENTAL Y PROGRAMA DE SEGUIMIENTO

1 Esquema director propuesto

Como ya se ha recogido con anterioridad la legisla-cioacuten vigente no diferencia entre las funciones de la vi-gilancia y el seguimiento refirieacutendose indistintamente a ellas como si se tratara de la misma actividad Sin embargo son referidas con la conjuncioacuten copulativa lsquorsquoyrsquorsquo que coordina aditivamente elementos anaacutelogos Es decir consciente o inconscientemente en la legis-lacioacuten baacutesica vigente queda establecida una relacioacuten de semejanza entre dos conceptos anaacutelogos que tie-nen entre siacute alguna coincidencia significativa

Cuadro 9 Definiciones del Diccionario de la Lengua Espantildeola (RAE 2001)

Vigilancia (Del lat vigilant a) cuidado y atencioacuten exacta en las cosas que estaacuten a cargo de cada uno

Seguimiento accioacuten y efecto de seguir

Seguir (Del lat sequ re de sequi con la t de ire) proseguir o continuar en lo empezado

De acuerdo con las definiciones del diccionario de la lengua espantildeola (RAE 2001) la vigilancia con-siste en el cuidado y atencioacuten exacta en las cosas que estaacuten a cargo de cada uno mientras que el seguimiento es la accioacuten y efecto de seguir encon-traacutendose entre las diversas acepciones de seguir las que lo definen como la accioacuten de proseguir o continuar lo empezado asiacute como observar el curso de algo (Cuadro 9) Por tanto teniendo en cuenta estas matizaciones la duracioacuten limitada de la obra de construccioacuten de una infraestructura de transporte frente a su posterior vida uacutetil y la necesidad de vigi-lar y seguir distintos aspectos ambientales en ambas fases con la participacioacuten de diferentes agentes se propone un esquema director que permita diferen-ciar las actividades a realizar en cada una de ellas

Mientras que los objetivos de la vigilancia quedan claramente establecidos en el RD 11311988 la legis-lacioacuten baacutesica vigente no los incluye entre los con-ceptos que define en su anexo 1 Paralelamente el capiacutetulo III del RDL 12008 referido al control del cumplimiento de las DIA establece su marco baacutesico de desarrollo alternando referencias al seguimiento y vigilancia sin establecer diferencias pese a que no

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tienen el mismo significado vigilancia y seguimiento Ante esta situacioacuten y teniendo en cuenta los posi-bles agentes implicados en las distintas fases de proyecto obra y explotacioacuten de una infraestructura

de transporte se advierte la posibilidad de confec-cionar un esquema director de mayor detalle viable y realista que permita la propuesta e implementa-cioacuten de un PVA y un PS vigentes en distintas fases

Estudio Informativo EIA

Proyecto de construccioacuten Ejecucioacuten

APROBACIOacuteN

APROBACIOacuteN

Plan de autocontrol ambiental en obra

Autocontrol ambiental

Deteccioacuten no conformidades (NC)

Ejecucioacuten de medidas y resolucioacuten NC

PLAN de seguimiento Seguimiento

ambiental

Informes de seguimiento

Anaacutelisis y compilacioacuten

Informes de vigilancia

Vigilancia ambiental

Anaacutelisis y en su caso APROBACIOacuteN

PROYECTO (medidas

ambientales)

PROGRAMA de vigilancia

(PVA) y seguimiento

DIA

Retroalimentacioacuten para la mejora de futuros proyectos

Operacioacuten

Oacuterg

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Figura 9 Diagrama de flujo que recoge las distintas fases de la vigilancia ambiental por ejemplo aplicada a las plantaciones en una infra-estructura de transporte los principales documentos que en cada caso se generan asiacute como los agentes implicados en su implementacioacuten

La ejecucioacuten de un proyecto se puede esquematizar en cuatro etapas seguacuten su secuencia cronoloacutegica

bull Fase 1 ndash Fase inicial comienza con el replan-teo de la obra se inicia la implementacioacuten del PVA mediante la evaluacioacuten del contenido de la DIA se revisa el proyecto y se definen las acciones de control ambiental a determinar durante la ejecucioacuten de las obras Se configu-ra el PVA ajustado a la obra en cuestioacuten de acuerdo con lo establecido en la DIA

bull Fase 2 ndash Fase de obras construccioacuten de la infraestructura y liacutemite de vigencia del PVA como se concibe actualmente con el informe final de recepcioacuten de la obra

bull Fase 3 ndash Periodo de garantiacutea primera parte de la fase de explotacioacuten de la infraestructu-ra hasta que finaliza el periacuteodo habitual de garantiacutea A partir de este momento ya no rige el proyecto de construccioacuten y las tareas de seguimiento deben orientarse a evaluar la efi-cacia y evolucioacuten de las medidas correctoras que acompantildearaacuten a la infraestructura durante su vida uacutetil Por ello se propone como mo-mento de inicio del PS a modo de extensioacuten del PVA durante la fase de funcionamiento En este caso teniendo en cuenta un escenario realista de actores y presupuesto se debe-riacutea considerar la capacidad del operador para desempentildear las tareas que por otro lado ac-tualmente ya realiza en muchos casos

bull Fase 4 -Fase de explotacioacuten periacuteodo varia-ble de aplicacioacuten del PS en funcioacuten de las variables objeto del mismo Durante esta etapa se supone una incesante obtencioacuten de resultados fruto de los antildeos de segui-miento sobre el grado de eficacia de las medidas proyectadas Todo ello constituye informacioacuten baacutesica para futuros proyectos

en funcioacuten de los objetivos inicialmente fi-jados que deberiacutea centralizarse mediante sistemas de informacioacuten de faacutecil acceso en el oacutergano ambiental como uacutenico agente conocedor de los procedimientos de EIA desarrollados en relacioacuten con cualquier ti-pologiacutea de proyectos en el aacutembito de sus competencias

Fase 1 (replanteo)

Inicio del PVA

Fase 2 (obras)

PVA (hasta recepcioacuten de la obra)

Fase 3 (garantiacutea)

Inicio del PS

Fase 4 (explotacioacuten)

Continuacioacuten del PS

Recepcioacuten de la obra

Figura 10 Etapas de un proyecto en relacioacuten con el PVA y el PS

La duracioacuten del PS (fases 3 y 4) deberiacutea ser lo su-ficientemente extensa como para garantizar unas conclusiones vaacutelidas que permitan retroalimentar el sistema y la evolucioacuten en el disentildeo de las medidas proyectadas en funcioacuten de los resultados obtenidos y los objetivos inicialmente establecidos Depen-diendo de las variables a seguir se podriacutea recomen-dar una duracioacuten del PS de entre 3 y 10 antildeos

2 Responsabilidades y participacioacuten de los distintos agentes

Seguacuten el diagrama anterior el proyecto de cons-truccioacuten deberiacutea recoger no solo el PVA que re-giraacute durante la ejecucioacuten de las obras sino tam-bieacuten los criterios baacutesicos para el seguimiento ambiental a medio y largo plazo durante la fase de explotacioacuten lo que constituiriacutea el denomina-do PS

El PVA seriacutea de aplicacioacuten directa durante la construccioacuten (hasta la finalizacioacuten del plazo de

garantiacutea de la obra) y corresponderiacutea seguacuten el caso a la direccioacuten facultativa (actuando direc-tamente o a traveacutes de una asistencia teacutecnica) o por ejemplo al oacutergano ambiental en el caso de la Comunidad de Madrid En todo caso quedariacutea integrado en el marco de una CMCC si se ex-tendiese el modelo de funcionamiento de comi-siones mixtas aplicado en Cataluntildea El contra-tista principal podriacutea utilizar el programa para redactar su propio plan de autocontrol integrado en el sistema de aseguramiento de calidad de la obra Evidentemente el plan de autocontrol del contratista complementario del PVA deberiacutea gozar del visto bueno por parte de la direccioacuten facultativa Se supone que a lo largo de la ejecu-cioacuten de los trabajos ambos direccioacuten y contra-tista identificaraacuten no conformidades que seraacuten resueltas por el contratista (incluyendo tambieacuten aquellas vinculadas a las medidas medioambien-tales ejecutadas marras etc) Durante la fase de construccioacuten las pautas y los resultados de la vigilancia ambiental deberiacutean recogerse en in-formes de vigilancia redactados por la direccioacuten

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facultativa seguacuten la legislacioacuten baacutesica De alguna forma estos informes deberiacutean acabar en manos del oacutergano ambiental para lo que el modelo de las mencionadas comisiones mixtas se revela nuevamente como un esquema eficaz

Por uacuteltimo durante la explotacioacuten de la infraes-tructura el operador en el caso de carreteras o el administrador de la infraestructura en el caso de los ferrocarriles estariacutea en disposicioacuten de asumir el seguimiento ambiental a medio y largo plazo pues-to que en algunas ocasiones ya realiza actividades equivalentes como consecuencia de la implantacioacuten de sus sistemas de control de la calidad Ello per-mitiriacutea optimizar los recursos disponibles en labores de seguimiento que actualmente no se realizan in-volucrar a los administradores y operadores respon-sables de las infraestructuras en la elaboracioacuten de documentos e informes de intereacutes para la redaccioacuten de nuevos proyectos poner en valor los documentos que actualmente se generan en dichos procedimien-tos que en el actual esquema no son accesibles y sobre todo permitir el encuentro e intercambio de informacioacuten con actores que de otra manera no coincidiriacutean

Como se ha ilustrado en otros apartados de este capiacutetulo el seguimiento a largo plazo tendriacutea por objeto fundamentalmente generar informacioacuten uacutetil sobre la evolucioacuten del entorno afectado por la infraestructura asiacute como evaluar la eficacia de las medidas correctoras implantadas (incluyendo la revegetacioacuten) Si se quiere este programa de seguimiento tendriacutea un objeto menos teacutecnico y maacutes cientiacutefico (al menos en lo que se refiere a la utilidad de las variables objeto de la monitoriza-cioacuten) Al igual que se apuntaba con los informes de vigilancia los informes de seguimiento a me-dio y largo plazo deberiacutean acabar en el oacutergano ambiental Toda esta informacioacuten adecuadamente procesada tendraacute una indudable utilidad praacutectica para la redaccioacuten de proyectos en el futuro asiacute como para la definicioacuten de las medidas impuestas por las DIA

El modelo propuesto seriacutea compatible con las dis-tintas normas en materia de evaluacioacuten ambiental tanto la legislacioacuten baacutesica como con la de aque-llas comunidades autoacutenomas que de acuerdo con sus competencias han desarrollado esta quedado facultado el Ministerio de Medio Ambiente y Medio Rural y Marino para dictar cuantas disposiciones sean necesarias para el desarrollo de lo establecido

en la legislacioacuten vigente en particular en el actual Reglamento

Por uacuteltimo en el disentildeo de este esquema sobre la base de las experiencias conocidas particularmente el modelo de la CMCC y con el objeto de lograr un flujo de informacioacuten lo maacutes eficaz posible en el sistema seriacutea conveniente incorporar la figura de los redactores de los proyectos y de los EsIA a las citadas comisiones De este modo se situariacutean todos los actores implicados en las distintas fases del pro-yecto tal como se representa en la Figura 11

Propuesta de Comisioacuten Mixta de Concertacioacuten y

Control

(CMCC)

+ +

Direccioacuten de obra

Oacutergano sustantivo

Oacutergano ambiental

Direccioacuten ambiental de obra

Promotor

Contratista

Operadoradministrador

Redactores delProyecto y esia

Figura 11 La incorporacioacuten de los autores del proyecto y del EsIA y posteriormente de las entidades operadoras o administradoras de infraestructuras a las CMCC agilizariacutea la retroalimentacioacuten del sistema independientemente de que la responsabilidad en materia de vigilancia y seguimiento fuera competencia del oacutergano ambi-ental o del oacutergano sustantivo y es compatible con la realidad del Estado y de las distintas comunidades autoacutenomas

3 El seguimiento ambiental en el contexto del aseguramiento de la calidad

De todos es sabido que la implantacioacuten de sistemas y planes que garanticen y controlen la calidad es praacutectica habitual en el aacutembito de la construccioacuten y explotacioacuten de las infraestructuras de transporte sin embargo con frecuencia se omite esta circunstancia por los actores que habitualmente intervienen en los procedimientos de EIA ignoraacutendose las posibilida-des que en materia de seguimiento ambiental ofrece al sistema

En la documentacioacuten de calidad se incluyen o debe-riacutean incluirse las especificaciones de seguimiento y vigilancia ambiental como uno maacutes de los requisitos a cumplir (requisito legal de obligado cumplimiento cuando es consecuencia de la existencia de una DIA

o voluntario si es derivado de la normativa interna de la compantildeiacutea)

Por tanto como parte de la documentacioacuten de calidad en los informes de aseguramiento y con-trol de calidad se deberiacutean relacionar todas las medidas ambientales y sus no conformidades (si las hubiera) asiacute como su resolucioacuten En resumen como se ha tratado en otros apartados de este libro las condiciones ambientales deben ser teni-das en cuenta durante la elaboracioacuten del proyecto en la ejecucioacuten de las obras y durante la explota-cioacuten de la infraestructura

Los requisitos ambientales durante la fase de ela-boracioacuten del proyecto deben ser considerados ele-mentos de entrada al disentildeo (en sus diferentes fases desde el proyecto baacutesico hasta el disentildeo detallado en los proyectos de construccioacuten) y por tanto identificados desde el principio Los con-troles de revisioacuten del disentildeo para garantizar la calidad del mismo deberaacuten asegurar que los re-quisitos ambientales han sido tenidos en cuenta y durante las fases de ejecucioacuten y explotacioacuten se deberaacute obtener informacioacuten que verifique la efica-cia de dichas medidas si no han podido ser vali-dadas anteriormente En cualquier caso se reco-mienda la validacioacuten de dichas medidas a lo largo de la vida de la infraestructura para determinar la idoneidad de las mismas y que estos conocimien-tos puedan ser tenidos en cuenta en la redaccioacuten de futuros proyectos

Durante la ejecucioacuten de la obra con el fin de opti-mizar recursos y hacer maacutes eficiente los procesos asociados a la ejecucioacuten la empresa constructora deberaacute integrar los requisitos ambientales como un elemento maacutes en la gestioacuten de la obra Asiacute si dispo-ne de un plan de aseguramiento de la calidad (PAC) para garantizar que la obra se ejecuta conforme al proyecto se deberaacuten incluir como parte del PAC los procedimientos especiacuteficos de medio ambiente y con ellos los de control seguimiento y vigilancia de forma integrada o no con los de calidad Con esto quedariacutean desarrollados particularizados e in-tegrados en el PAC los requisitos de seguimiento y vigilancia para la fase de construccioacuten

Es praacutectica habitual identificar las unidades de obra con aspectos ambientales asociados para que se ejecuten conforme a lo establecido en los pro-cedimientos de control operacional y se controlen normalmente siguiendo un programa de puntos de

inspeccioacuten (PPI) Los controles a ejecutar durante la vigilancia y seguimiento ambiental en construccioacuten deberaacuten generar sus propios PPI

Como complemento a los autocontroles del contra-tista responsable de la ejecucioacuten de la obra hasta fi-nalizado el periacuteodo de garantiacutea el oacutergano sustantivo (seguacuten la legislacioacuten baacutesica) a traveacutes de la direccioacuten facultativa asistencia teacutecnica o cualquier otra figura independiente respecto de quien ha ejecutado las medidas ambientales establecidas en la DIA haraacute el seguimiento y la vigilancia de dichas medidas con el fin de garantizar su eficacia Como ya se ha comen-tado anteriormente esta responsabilidad en algunas autonomiacuteas recae por ley en el oacutergano ambiental Igualmente el oacutergano ambiental se puede apoyar en una asistencia teacutecnica independiente de quien ejecute las medidas ambientales

Una vez que la infraestructura entra en funciona-miento el responsable de la operacioacuten seriacutea quien como parte de la gestioacuten de la infraestructura de-sarrollara un PS en explotacioacuten que dariacutea respuesta por un lado al cumplimiento de las obligaciones ambientales recogidas en la DIA para esta fase y por otro lado definiriacutea aquellos paraacutemetros ambientales que deberaacute monitorizar Dicha monitorizacioacuten serviraacute para verificar a medio y largo plazo el comporta-miento ambiental de las medidas de restauracioacuten acometidas durante la construccioacuten asiacute como su respuesta ante las labores de mantenimiento que se esteacuten llevando a cabo Estos trabajos de segui-miento ambiental de la empresa que opera y man-tiene la infraestructura deberaacuten estar documentados y registrados como un elemento maacutes de su sistema de gestioacuten optimizando recursos e integrando estos con otros controles de calidad de la infraestructura que pueden estar soportados en el sistema de ca-lidad de la empresa responsable de estos trabajos

Finalmente la participacioacuten de esta entidad en la CMCC creada antes de que se iniciara la obra de la infraestructura en cuestioacuten (Figura 11) permitiriacutea completar el flujo de informacioacuten y la vocacioacuten de servicio puacuteblico que se presupone a cualquier co-misioacuten de estas caracteriacutesticas De este modo se pondriacutean en comuacuten los resultados de la vigilancia y seguimiento ambiental en cada fase asiacute como la po-sible necesidad de plantear nuevas medidas correc-toras disponiendo para la discusioacuten las soluciones maacutes apropiadas en funcioacuten del criterio de todos los especialistas implicados en las distintas fases del ciclo de vida del proyecto

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Figura 12 El estudio de la eficacia de algunas medidas correctoras durante la fase de explotacioacuten como los diferentes disentildeos de dispositivos de escape para la fauna incluidos en estas dos imaacutegenes seriacutean tareas propias del PS (Foto Carlos Iglesias)

IV ALCANCE Y CONTENIDO GENERAL DE LOS PVA Y DE LOS PS

La realizacioacuten del seguimiento se basa en la for-mulacioacuten de paraacutemetros que proporcionan la for-ma de estimar de manera cuantificada y simple en la medida de lo posible la realizacioacuten de las me-didas previstas y sus resultados pueden existir por tanto dos tipos de paraacutemetros indicadores si bien no siempre los dos tienen sentido para todas las medidas por lo que se propone la redaccioacuten de PVA y PS cuya diferencia fundamental reside en

bull PVA se estableceraacuten indicadores de reali-zacioacuten que miden la aplicacioacuten y ejecucioacuten efectiva de las medidas correctoras

bull PS se estableceraacuten indicadores de eficacia que miden los resultados obtenidos con la aplicacioacuten de la medida correctora correspon-diente

1 Contenido del PVA en el proyecto de construccioacuten

El PVA se trata de un documento de caraacutecter abierto que durante el transcurso de la obra debe permitir la deteccioacuten de nuevas afecciones o impactos no previstos anteriormente para los que debe prever alguna respuesta en forma de adopcioacuten de nuevas medidas preventivas o correctoras Ademaacutes el PVA ha de concretar todas las operaciones de control y vigilancia del proyecto tanto espacial como tempo-ralmente y se tendraacute que adaptar continuamente

a los requerimientos del proyecto para alcanzar la maacutexima eficacia

Cuadro 10 Exigencia legal (art 11 del RD 11311988)

hellip El programa de vigilancia ambiental estableceraacute un sistema que garantice el cumplimiento de las indicaciones y medidas protectoras y correctoras contenidas en el estudio de impacto ambiental

El principal objetivo del PVA en el esquema director propuesto se ajusta a las metodologiacuteas habitual-mente desarrolladas para garantizar que el proyec-to sometido a control se desarrolle cumpliendo con los condicionantes ambientales emanados de la DIA y por lo general los sistemas establecidos en el proyecto permiten detectar cualquier desviacioacuten en obra o incluso impactos no previstos con anteriori-dad Sin embargo el modo en que se implementa el PVA y cierta desautorizacioacuten praacutectica de los teacutecni-cos implicados en vigilancia ambiental como conse-cuencia de su posicioacuten en el esquema de los actores que habitualmente intervienen en obra constituyen la principal debilidad del actual modelo Por este motivo seriacutea deseable la existencia de una comisioacuten mixta en la que se verifique cada hito y queden de manifiesto las responsabilidades e informes de cada parte implicada

Figura 13 La limpieza final y durante la obra en el entorno de las obras de drenaje es un punto de particular atencioacuten del PVA (izquierda) Acopios de tierra vegetal dispuestos en el periacutemetro de la ocupacioacuten de la obra (derecha) (Foto Carlos Iglesias)

Cuadro 11 Objetivos habitualmente incluidos en el PVA de un proyecto de construccioacuten

bull Controlar la correcta ejecucioacuten de las medidas de integracioacuten ambiental proyectadas y su adecuacioacuten a los criterios establecidos en la DIA

bull Detectar impactos no previstos en el EsIA y plantear las oportunas medidas protectoras correctoras etc

bull Verificar los estaacutendares de calidad de los materiales (tierra plantas agua etc) y medios propuestos en el proyecto de construccioacuten

bull Comprobar la efectividad de las medidas ejecutadas y en caso de ineficacia determinar las posibles causas y propuesta de soluciones

bull Valorar y proporcionar informacioacuten acerca de la calidad y oportunidad de las medidas protectoras yo correctoras yo compensatorias ejecutadas

bull Informar al oacutergano competente (y a la CMCC cuando proceda) sobre los aspectos objeto de vigilancia y ofrecerle un meacutetodo sistemaacutetico lo maacutes sencillo y econoacutemico posible para realizar la vigilancia de una forma eficaz

bull Establecer el tipo de informes su frecuencia y el procedimiento de remisioacuten al oacutergano competente y cuando proceda a la CMCC

bull Establecer un protocolo de funcionamiento vaacutelido con el papel previsto para cada actor que permita adoptar nuevas medidas no contempladas en el proyecto o modificar sustancialmente las proyectadas

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IacuteNDICE

En el PVA deben quedar organizados los diferentes aacutembitos de control lo que podriacutea realizarse agru-pando la informacioacuten por variables ambientales (agua aire vegetacioacuten fauna etc) y las medidas dedicadas a cada una de ellas o seguacuten su incidencia sobre diferentes acciones de la obra (excavaciones instalaciones rutas etc)

Para cada accioacuten de control que se defina se habraacute de definir como miacutenimo

bull Metodologiacutea y sistemas de control (visual muestreos etc) asiacute como el personal y los materiales a utilizar en cada caso

bull Frecuencia y momento de aplicacioacuten se de-finiraacute el momento de inicio asiacute como el pe-riodo en el que se realizaraacute el control y su periodicidad

bull Alcance se debe indicar en queacute circunstancias se tiene que realizar el control y definirse la unidad de referencia

bull Indicadores ambientales y niveles de refe-rencia en los casos en que se definan se deben establecer los paraacutemetros de referen-cia y los valores umbrales con indicacioacuten expresa de la normativa vigente cuando proceda

Para implementar lo anterior lo maacutes habitual es que la DAO se dote de una asistencia teacutecnica En

cualquier caso con recursos propios o mediante asistencia teacutecnica en obra se necesita estimar de alguacuten modo la realizacioacuten de las medidas previstas en proyecto y en ocasiones los re-sultados de las que en ese momento se puedan valorar Para ello suelen establecerse dos tipos de paraacutemetros indicadores si bien no siempre los dos tienen sentido para todas las medidas a vigilar

bull Indicadores de realizacioacuten en obra permiten me-dir o estimar la aplicacioacuten yo ejecucioacuten de una medida protectora yo correctora yo compensato-ria

bull Indicadores de eficacia permiten medir o esti-mar cualitativamente la funcionalidad de las me-didas protectoras yo correctoras yo compensa-torias

De los valores de estos indicadores el sistema de vigilancia debe permitir la adopcioacuten de nuevas me-didas correctoras o la repeticioacuten de las aplicadas Por este motivo los indicadores van acompantildeados de umbrales de alerta que advierten de la existen-cia de una no conformidad o de ineficacias reales o potenciales

Si el modelo en el que se desarrolla la vigilancia ambiental no permite lo anterior la vigilancia seraacute ineficaz en siacute misma independientemente del con-tenido del propio PVA la calidad del proyecto y el procedimiento de EIA precedentes

Cuadro 12 Cronologiacutea habitual de los informes que se deben realizar en la obra de una infraestructura de transporte

bull Antes del inicio de las obras

Sirve para verificar la adecuacioacuten del proyecto de construccioacuten a la DIA extractar el PVA del proyecto y adecuarlo a la realidad del momento y suele tener la pretensioacuten de incorporar el PAC del contratista para crear un documento de referencia con todos ellos

bull Paralelo al acta de comprobacioacuten del replanteo

Sirve para constatar la delimitacioacuten definitiva de todas las aacutereas afectadas por la obra y sus elementos auxiliares verificar la situacioacuten de los principales valores de los indicadores sobre jalonamiento de las obras para su revisioacuten por exceso o defecto de los valores umbral etc Momento en el que tambieacuten suele tenerse la pretensioacuten de que el contratista presente un lsquomanual de buenas praacutecticas ambientales en obrarsquo

bull Informes perioacutedicos durante la fase de obras

En funcioacuten del promotor suele establecerse una frecuencia variable para la remisioacuten de una serie de informes perioacutedicos ordinarios cuya principal finalidad es documentar y recopilar las incidencias acontecidas durante ese tiempo

bull Informes especiales

Con independencia de los anteriores se suele contemplar la emisioacuten de informes especiales cuando se presenten situaciones o circunstancias que justifiquen su comunicacioacuten urgente a los distintos responsables de la obra Lo normal es que en el propio PVA se indiquen los asuntos que puedan requerir una atencioacuten particular

bull Antes del acta de recepcioacuten de la obra

Lo ideal seriacutea que el informe anterior al acta de recepcioacuten de la obra se compusiera de una serie de informes especiacuteficos sobre cada variable ambiental y las medidas preventivas yo correctoras yo compensatorias establecidas en cada caso incluyendo su valoracioacuten hasta la fecha

2 Contenido del PS a medio y largo plazo

El programa de seguimiento (PS) se define como aquel que permite extender el control de la eficacia de las medidas ambientales con posterioridad a la recepcioacuten de la obra durante un plazo inicialmente estimado de 3 a 10 antildeos para estudiar la evolucioacuten de su eficacia y funcionalidad asiacute como el segui-miento y deteccioacuten de nuevos impactos no previstos en fases previas Como se ha sentildealado con anterio-ridad el seguimiento a medio y largo plazo busca recopilar datos y generar informacioacuten uacutetil sobre la evolucioacuten de las medidas correctoras asiacute como su incidencia sobre el entorno de la infraestructura

El programa de seguimiento tendriacutea un componen-te maacutes cientiacutefico que teacutecnico (al menos en lo que se refiere al estudio de las variables monitorizadas) y en el escenario propuesto permitiriacutea estrechar el contacto con el mundo acadeacutemico asiacute como impul-sar las divisiones de I+D+i (Investigacioacuten + Desarro-llo + innovacioacuten) del sector privado En coherencia con los apartados anteriores de este capiacutetulo el PS

deberiacutea incluirse en un anejo especiacutefico del proyec-to junto con la justificacioacuten del cumplimiento de la DIA y el PVA y su presupuesto deberiacutea quedar detallado en el presupuesto de inversioacuten

Recepcioacuten de la obra

Antildeo 0 1 2 3 4 5 6

P GARANTIacuteA

Figura 15 El PS se empezariacutea a aplicar en el mismo momento de recepcioacuten de la obra y su duracioacuten puede exceder ampliamente el periacuteodo de garantiacutea de la misma Ademaacutes el seguimiento de cada medida correctora o variable ambiental que se debe monitorizar puede tener diferente duracioacuten

La primera parte de la fase de funcionamiento se so-lapa con el periacuteodo de garantiacutea de la obra por lo que la deteccioacuten raacutepida de cualquier desviacioacuten de las me-didas correctoras sobre lo previsto inicialmente auacuten podriacutea ser teoacutericamente rectificada No obstante en este momento ya no rige el proyecto de construccioacuten por lo que se propone la necesidad de implementar

Figura 14 La imagen de la izquierda muestra el hueco existente en la base del cerramiento de una infraestructura lo que incrementa el riesgo de atropello de fauna en la fase de explotacioacuten (Foto Carlos Iglesias) La imagen de la derecha ilustra una solucioacuten al anterior inconveniente (Foto Xavier Artigas)

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IacuteNDICE

un PS como extensioacuten del PVA durante la fase de funcionamiento con nuevos responsables y maacutergenes de actuacioacuten Por ello teniendo en cuenta la realidad de las Administraciones y de las empresas implicadas en el aacutembito de las infraestructuras de transporte se propone el esquema desarrollado en este capiacutetulo aprovechando la capacidad del operador para desem-pentildear tareas de seguimiento que en muchos casos ya realizan como parte de su propio PAC

Sin embargo teniendo en cuenta la composicioacuten de la CMCC que tambieacuten se propone en este

capiacutetulo (Figura 11) en lo que concierne a las me-didas relacionadas con el procedimiento de EIA dichas tareas de seguimiento estariacutean sometidas al control puacuteblico de las administraciones respon-sables y al control teacutecnico de las empresas cons-tructoras y de ingenieriacutea participantes en las fases anteriores De esta manera toda la informacioacuten quedariacutea inmediatamente recopilada por el oacutergano competente en materia de vigilancia y seguimien-to y por otro lado los resultados obtenidos ten-driacutean una aplicabilidad directa sobre las medidas que habiacutea que considerar en futuros proyectos

Cuadro 13 Debido a las caracteriacutesticas de la fase de explotacioacuten cronologiacutea posible de informes de seguimiento en infraestructuras de transporte

bull Posterior a la recepcioacuten de la obra

Establece el estado de recepcioacuten de la obra en lo concerniente a las medidas preventivas yo correctoras yo compensatorias ejecutadas

bull Informes perioacutedicos durante el periacuteodo de garantiacutea

En funcioacuten de la variable a seguir o de la medida analizada se estableceraacute la frecuencia de remisioacuten de informes perioacutedicos ordinarios cuyos resultados puedan dar lugar a reclamaciones a los contratistas con motivo de la garantiacutea de obra

bull Informes semestrales yo anuales

En funcioacuten de la variable a seguir o de la medida analizada se estableceraacute la frecuencia de remisioacuten de informes perioacutedicos ordinarios cuyo periacuteodo de emisioacuten maacutes habitual seriacutea semestral o anual

bull Informes especiales

Con independencia de los anteriores se contempla la emisioacuten de informes especiales cuando se presenten situaciones o circunstancias que justifiquen su comunicacioacuten urgente a los distintos responsables de la obra

bull Informe final de seguimiento ambiental

En funcioacuten de la duracioacuten del seguimiento de cada variable ambiental o de la medida analizada se elaboraraacute un informe final de seguimiento en el que se incluyan las principales conclusiones aprendizajes yo recomendaciones que se podriacutean extraer de cara a su consideracioacuten en futuros proyectos y procedimientos de EIA

V CONTENIDO TEacuteCNICO DE LOS PVA Y PS

1 Hacia la actualizacioacuten de los PVA y PS

Como se ha podido comprobar en los capiacutetulos pre-cedentes la informacioacuten volcada en este libro es muy reciente a la par que novedosa Gran parte de esta informacioacuten la componen resultados y con-clusiones de artiacuteculos cientiacuteficos publicados recien-temente en prestigiosas revistas internacionales ademaacutes se ha adelantado informacioacuten todaviacutea no publicada que formaraacute parte de artiacuteculos cientiacutefi-cos bien porque estaacuten en proceso de publicacioacuten (artiacuteculos en prensa) bien porque se trata de re-sultados todaviacutea no publicados (ineacuteditos) Este es-fuerzo de revisioacuten y actualizacioacuten se debe en gran medida a que la mayoriacutea de losas autoresas del libro son miembros de los equipos de investigacioacuten que estaacuten dirigiendo yo participando en distintos proyectos de investigacioacuten en este aacutembito Por lo tanto se puede afirmar que la liacutenea de investiga-cioacuten en nuestro paiacutes progresa a buen ritmo y a un gran nivel reconocido internacionalmente

Para que estos resultados de investigacioacuten se inte-gren en los procesos productivos de los distintos actores que participan del ciclo de vida de las in-fraestructuras de transporte lineales es necesario abordar el desarrollo e innovacioacuten de nuevos pro-ductos y procesos a partir de estos resultados tal y como marca el proceso habitual de la I+D+i En este sentido y dado que es un proceso necesariamente posterior a la investigacioacuten todaviacutea estamos en un estadio temprano como para proponer los suficien-tes indicadores valores umbral de los mismos asiacute como medidas complementarias que permitan ga-rantizar y optimizar los resultados de las medidas correctoras propuestas El contenido teacutecnico de los PVA y PS que se avanzan a continuacioacuten se plan-tean como ejemplos de toda una bateriacutea de innova-ciones que deben producirse a corto y medio plazo en este aacutembito

2 Contenido teacutecnico del PVA indicadores de realizacioacuten en obra

A continuacioacuten se incluye un ejemplo de la incor-poracioacuten progresiva de nuevos conocimientos para la definicioacuten de los paraacutemetros maacutes importantes que podriacutean ser controlados por un PVA durante la ejecucioacuten de las obras de una infraestructura de transporte

Ejemplo calidad del suelo para la restauracioacuten de la cubierta vegetal

La mayoriacutea de los factores relacionados con los as-pectos cualitativos del suelo para la restauracioacuten de la cubierta vegetal poseen en comuacuten que el momento idoacuteneo para su control coincide con la construccioacuten del talud Puesto que una vez fina-lizada la obra es difiacutecil corregir cualquier aspecto del suelo que perjudique la restauracioacuten del talud a excepcioacuten de la fertilizacioacuten (veacutease capiacutetulo 7) no se incluyen indicadores de eficacia para el PS recogieacutendose como principales indicadores de rea-lizacioacuten los siguientes

Identificacioacuten de la medida correctora evaluacioacuten previa de los factores edaacuteficos que limitan el desarrollo de la vegetacioacuten

bull Factor agua disponible para las plantas

Objetivo analizar la relacioacuten entre los aportes y las peacuterdidas de agua el balance final deter-minaraacute la cantidad de agua disponible para la vegetacioacuten

Indicador balance entre aportes (precipitacio-nes y surgencias) peacuterdidas (escorrentiacutea en el talud) y capacidad de retencioacuten por parte del talud (pendiente compactacioacuten y textura del suelo microtopografiacutea contenido en materia orgaacutenica)

Frecuencia de la medida una sola vez durante la construccioacuten del talud

Valor umbral aunque este valor umbral de-penderaacute del nivel de compactacioacuten y la tex-tura del suelo en suelos maacutes compactados y arcillosos las pendientes tendraacuten que ser menores que en suelos arenosos y menos compactados (veacutease Capiacutetulo 2)

Momentos de anaacutelisis del valor umbral al fi-nalizar la construccioacuten del talud

bull Factor reciclado de nutrientes

Objetivo crear sistemas autosuficientes a lar-go plazo evitar los tratamientos perioacutedicos de fertilizacioacuten

Figura 16 El seguimiento de los pasos de fauna especiacuteficos (autoviacutea A-52 a la izquierda y autoviacutea M-501 a la derecha) en fase de explotacioacuten combinariacutea al menos el estudio de su eficacia sobre la permeabilidad fauniacutestica de la infraestructura y la evolucioacuten de la cubierta vegetal en su superficie (Foto TEG-UAM)

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IacuteNDICE

Indicador existencia de tierra vegetal rela-cioacuten carbononitroacutegeno (CN) actividad bioloacute-gica del suelo

Frecuencia de la medida una sola vez durante la construccioacuten del talud

Valor umbral no existe valor umbral para la tierra vegetal se debe potenciar su conser-vacioacuten en la mayor parte de la superficie del talud

Momentos de anaacutelisis del valor umbral al fi-nalizar la construccioacuten del talud

bull Factor pH

Objetivo evitar pH y valores de salinidad demasiado alejados de los que se pueden encontrar en el entorno no afectado por mo-vimiento de tierras o en espacios con vegeta-cioacuten natural proacuteximos

Indicador anaacutelisis del pH y la salinidad del suelo

Frecuencia de la medida una sola vez durante la construccioacuten del talud

Valor umbral normalmente el pH se deberiacutea encontrar entre 45 y 85 aunque esto va a depender del tipo de suelo del entorno no afectado y de la existencia de flora singular que sea de intereacutes introducir en el talud como especialistas edaacuteficas o de suelos salinos

Momentos de anaacutelisis del valor umbral al fi-nalizar la construccioacuten del talud

3 Contenido teacutecnico del PS indicadores de seguimiento en fase de explotacioacuten

A continuacioacuten se incluye un ejemplo aplicable al seguimiento del recubrimiento vegetal despueacutes de ejecutada la obra durante las labores de conserva-cioacuten y mantenimiento de la infraestructura y de la estabilidad de la superficie de un talud mediante el funcionamiento ecosisteacutemico del mismo en su fase de explotacioacuten

a Identificacioacuten de la medida correctora recubrimiento vegetal

bull Objetivo asegurar suficiente cobertura vege-tal para evitar procesos erosivos Integracioacuten

paisajiacutestica Mejora del funcionamiento eco-sisteacutemico del talud

bull Indicador cobertura vegetal

bull Frecuencia de la medida 2 veces al antildeo du-rante los primeros 5 antildeos En abrilmayo (se-guacuten la zona) momento de maacuteximo desarrollo vegetal y en julio momento de miacutenima co-bertura anual

bull Valor umbral 55 de cobertura mediante meacutetodo de punto-contacto (Andreacutes y Jorba 2000 El meacutetodo se explica maacutes adelante)

bull Momentos de anaacutelisis del valor umbral abrilmayo Aunque depende del tipo de talud y la bioclimatologiacutea normalmente si esta cober-tura baja de un miacutenimo del 50 durante el verano habriacutea que tomar medidas

bull Medida complementarias porcentaje de espe-cies perennes riqueza de especies y domi-nancia (iacutendice de Berger-Parker)

bull Observaciones el meacutetodo del punto-contacto es un meacutetodo que permite muestrear cobertura y diversidad de especies de una forma raacutepida y faacutecil Se estableceraacuten entre 3 y 5 transectos por cada zona de seguimiento (tres zonas de seguimiento por cada tipo de talud desmonte o terrapleacuten y cada tipo de suelo y clima) Es-tos transectos se realizan con la ayuda de una cinta meacutetrica la cual se colocaraacute a partir de 5 m desde la cabecera del talud y hasta 5 m del final del mismo (zona tampoacuten Figura 17) Una vez colocadas las cintas se trata de anotar cada 10 cm de esta cinta queacute tipo de vege-tacioacuten contacta con la cinta (suelo desnudo vegetacioacuten muerta o la especie vegetal en concreto) Para ello nos podemos ayudar de una barra riacutegida la cual colocaremos de forma vertical a la cinta meacutetrica aquello que toque con la barra seraacute lo que anotemos Una vez finalizados los transectos se trata de calcular mediante sencillas reglas de tres el porcen-taje de cobertura vegetal (viva y muerta) y el porcentaje de cobertura ocupado por cada especie Con estos datos tambieacuten podremos calcular iacutendices de diversidad (recomendamos el iacutendice de Hulbert 1971 probabilidad de un encuentro interespeciacutefico (del ingleacutes PIE pro-bability of interspecific encounter) porcentaje de especies perennes (mediante las mismas reglas de tres una vez identificadas cuaacuteles de

estas especies son perennes y calculando el porcentaje basaacutendose en a aquellos contac-tos con especies vegetales eliminando suelo

Figura 17 Descripcioacuten del meacutetodo punto-contacto

bull Observaciones

La probabilidad de un encuentro inter-especiacute-fico (PIE Hulbert 1971) es igual a

donde N es el nuacutemero total de contactos de espe-cies vegetales vivas encontrados S es el nuacutemero de especies encontradas y p

i es la proporcioacuten del

total de individuos representados por cada espe-cie en concreto Si este iacutendice es muy bajo (lt02) se deberaacuten tomar medidas para aumentar la di-versidad (pe plantacioacuten de lentildeosas herbicidas selectivos o fertilizacioacuten con C dependiendo del caso Veacuteanse Capiacutetulos 6 y 7 de este libro)

El iacutendice de Berger-Parker es un meacutetodo de faacutecil caacutelculo complementario al PIE descrito anteriormente que nos permitiraacute conocer la existencia de especies extremadamente domi-nantes que puedan comprometer el desarrollo del proceso sucesional del talud y el eacutexito de otras medidas correctoras (Garciacutea-Palacios et al 2010) Aprovechando los datos del meacute-todo punto-contacto anteriormente descrito podemos calcularlo sin ninguacuten esfuerzo extra

El iacutendice de Berger-Parker es igual a NmaxN siendo Nmax el nuacutemero de contactos de la especie maacutes abundante y N el nuacutemero total de contactos (aquiacute solo contaremos aque-llos contactos de especies vivas eliminan-do aquellos de suelo desnudo o vegetacioacuten muerta) localizados en el transecto Si este iacutendice es mayor de 05 deberiacuteamos aplicar

1 Establecer transecto

2 Anotar queacute encontramos cada 10 cm

3 Ayudarnos de una barra riacutegida para ver queacute se cruza con el transecto

Liacutenea de transecto (en rojo)

Superficie de talud

5 m (zona tampoacuten)

5 m (zona tampoacuten)

desnudo) y el iacutendice de dominancia (recomen-damos el iacutendice de Berger-Parker explicado maacutes adelante)

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IacuteNDICE

medidas correctoras (uso de herbicidas es-peciacuteficos fertilizacioacuten con C (veacutease Capiacutetulo 7)

b Identificacioacuten de la medida correctora funcionamiento ecosisteacutemicoestabilidad del talud

bull Objetivo identificar el grado de eacutexito del pro-ceso de restauracioacuten

bull Indicador meacutetodo LFA (landscape functional analysis)

bull Frecuencia de la medida dos veces por antildeo

bull Valor umbral el meacutetodo genera tres iacutendices de funcionamiento No existen valores umbral concretos el gestor deberaacute tratar de que es-tos iacutendices sean lo maacutes altos posibles y so-bre todo de que aumenten cada antildeo Esta es una medida integrativa muy buena del eacutexito del proceso de restauracioacuten

bull Momentos de anaacutelisis del valor umbral abrilmayo

bull Medidas complementarias dependiendo de doacutende identifiquemos el fallo aplicaremos di-ferentes medidas correctoras (veacutease bibliogra-fiacutea recomendada y Capiacutetulo 7)

bull Observaciones la descripcioacuten detallada de esta metodologiacutea se encuentra en httpwwwcsiroauservicesEcosystemFunctionAnalysishtml o en httpwwwrevistaecosistemasnetrevista_frameasppagina=2Farticuloasp3FId3D8826Id_Categoria3D126tipo3Dportada (para una breve descripcioacuten en espantildeol) No obstante se ofrece en este libro un pequentildeo resumen intro-ductorio

Esta metodologiacutea se basa en la existencia de fuentes y sumideros de recursos Las fuen-tes en este caso son los espacios libres de vegetacioacuten (suelo desnudo) los cuales gene-ran escorrentiacutea cuando llueve permitiendo el transporte de agua y nutrientes (y la peacuterdida de suelo asociada) hasta zonas donde se re-tiene este flujo de sedimentos (los sumide-ros) Estos sumideros estaacuten formados bien por la vegetacioacuten existente o por estructuras inertes (restos de ramas rocas relieves del terreno) que retienen parte del flujo de agua y nutrientes procedentes de las aacutereas de suelo desnudo cercanas (Figura 18)

Figura 18 Ilustracioacuten de zonas fuente y aportacioacuten de sedimentos (flechas azules) y zonas sumidero y retencioacuten de sedimentos (en rojo)

Esta metodologiacutea se basa en dos partes principa-les la realizacioacuten de transectos donde se identi-fican las clases de parches (o sumideros) que te-nemos y la caracterizacioacuten de cada uno de estos parches (incluyendo las zonas fuente)

TRANSECTOS

En estos transectos cuantificamos median-te un meacutetodo muy similar al punto-contacto (descrito anteriormente) doacutende se encuen-tran estos parches la distancia entre ellos y su tamantildeo Para ello el inventor de este meacutetodo (David Tongway) nos facilita en su paacutegina web una hoja de caacutelculo de Excel que nos calcularaacute automaacuteticamente estas varia-bles una vez introducidos los datos del tran-secto (Figura 19)

CARACTERIZACIOacuteN

En esta parte nos encargaremos de cuanti-ficar las caracteriacutesticas principales de estos parches mediante 11 variables de raacutepida me-dicioacuten Esta variables nos permiten calcular los tres iacutendices de funcionamiento que nos da este meacutetodo (se calculan con la misma hoja de caacutelculo Excel descrita anteriormente) daacutendonos un valor de funcionamiento para el talud muestreado Realizando este meacutetodo en tres taludes de cada tipo (desmonte o terra-pleacuten) por cada zona compartiendo el mismo tipo de suelo y clima obtendremos una me-dida muy buena del eacutexito de las diferentes medidas de restauracioacuten realizadas y su eacutexito en cada tipo concreto de talud al que nos en-frentamos en la infraestructura vial completa La Tabla 1 resume las medidas que tendremos que hacer y para queacute iacutendices se utilizan

Figura 19 Representacioacuten de transecto donde se identifican distintos tipos de parches sumidero asiacute como su anchura Veacutease la metodologiacutea detallada en httpwwwcsiroauservicesEcosystemFunctionAnalysishtml

(a) Grasses with ring formation

DOWNSLOPE

Patch length

NB Soil inside ring doesnot comprise inter-patch

Patch length

Obstruction width

Obstruction width(must be in contact with the soil)

(b) Clumps of grassesEither growing closely together or connected with litter bridgesAlso includes situation whereTape crosses a litter bridge

Patch length

Patch length

Obstruction width

(c)Log

TAPE

Patch length

Obstruction width

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IacuteNDICE

Tabla 1Resumen de las variables que hay que medir en cada tipo de parche la lectura bioloacutegica que obtenemos de ellas y para cuaacutel de los tres iacutendices que nos da la metodologiacutea LFA se utiliza

VARIABLE SIGNIFICADO IacuteNDICE EN EL QUE SE UTILIZA

Cobertura totalVulnerabilidad a la erosioacuten y peacuterdida de suelo por el impacto de gotas de lluvia

Estabilidad

Cobertura basal de especies herbaacuteceas y arbustivas

Evaluacutea la contribucioacuten de la biomasa de raiacuteces a los procesos de reciclaje de nutrientes

Infiltracioacuten

Reciclaje de nutrientes

Cobertura de hojarasca origen y grado de descomposicioacuten

Indica la cantidad y calidad de la materia orgaacutenica

Infiltracioacuten

Reciclaje de nutrientes

Cobertura de costra

bioloacutegica (formada por

cianobacterias musgos y

liacutequenes)

Indicador de la estabilidad de la superficie del suelo de su resistencia a la erosioacuten y de la disponibilidad de nutrientes

Reciclaje de nutrientes

Grado de fragmentacioacuten de

la costra

Mide la cantidad de costra superficial disponible para la erosioacuten hiacutedrica o eoacutelica

Estabilidad

Tipo y grado de erosioacutenEstima la naturaleza y gravedad de los procesos erosivos actuales

Estabilidad

Materiales depositadosEvaluacutea la cantidad de depoacutesitos aluviales

Estabilidad

Microtopografiacutea

Indicador de la rugosidad de la superficie del suelo basada en su capacidad para retener agua sedimentos y semillas

Infiltracioacuten

Reciclaje de nutrientes

Resistencia a la

perturbacioacutenEstima la probabilidad de perder suelo por una perturbacioacuten mecaacutenica

Estabilidad

Test de humectacioacutenEvaluacutea la estabilidaddispersioacuten de los agregados del suelo cuando estaacute huacutemedo

Estabilidad

Infiltracioacuten

TexturaIndicador de la capacidad de infiltracioacuten y almacenamiento de agua

Estabilidad

Modificado de Tongway et al 2004 Veacutease metodologiacutea detallada en httpwwwcsiroauservicesEcosys-temFunctionAnalysishtml

VI PREGUNTAS CLAVE

iquestEs lo mismo seguimiento y vigilancia ambiental

Aunque la legislacioacuten actual no los diferencia conceptualmente no es lo mismo seguimiento que vigilancia ambiental La existencia de diferentes actores en las fases de construccioacuten y explotacioacuten de infraestructuras de transporte hace recomen-dable desarrollar ambas actividades en la legis-lacioacuten baacutesica no solo desde la perspectiva de la disciplina y responsabilidad ambiental sino por su potencial impliacutecito para actualizar y consoli-dar el conocimiento teacutecnico y cientiacutefico de cada momento

iquestPuede el contratista vigilarse a siacute mismo

Con independencia del oacutergano competente en materia de seguimiento y vigilancia ambiental el contratista no debe asumir la vigilancia ambiental de su propia obra en ninguacuten caso

iquestDebe incluirse el presupuesto del PVA en el presupuesto de ejecucioacuten material (PEM) del proyecto

En ninguacuten caso el PVA debe formar parte del PEM del proyecto puesto que no es una actividad que deba realizar el contratista sino el oacutergano respon-sable con personal propio o mediante asistenta teacutecnica El lugar adecuado para valorar su coste econoacutemico es el presupuesto de inversioacuten antes denominado presupuesto para conocimiento de la Administracioacuten

iquestPuede un operadoradministrador implementar el PS de su propia infraestructura

Teniendo en cuenta la limitacioacuten de recursos de la Administracioacuten como demuestra la experien-cia de estos 25 antildeos de evaluacioacuten ambiental es recomendable aprovechar el PAC del operadoradministrador por su complementariedad y dupli-cacioacuten en ocasiones con las tareas propias del seguimiento ambiental en fase de explotacioacuten Debido a la componente cientiacutefica de esta fase y la necesidad de reportar a una CMCC ya fuera con recursos propios o ajenos previsiblemente res-paldariacutea el desarrollo de la I+D+i en las empresas yo potenciariacutea la colaboracioacuten con instituciones acadeacutemicas y de investigacioacuten

iquestDebe incluirse el presupuesto del PS en el PEM del proyecto

En ninguacuten caso el PS debe formar parte del PEM del proyecto puesto que no es una actividad que deba realizar el contratista de la obra sino el oacuter-gano responsable con personal propio o mediante asistenta teacutecnica Quizaacutes en el futuro pueda ser desarrollado por el operadoradministrador de la infraestructura reportando a la CMCC de acuerdo con la propuesta elaborada en este libro El lugar adecuado para la valoracioacuten de su coste econoacutemi-co es el presupuesto de inversioacuten

iquestPor queacute el seguimiento arqueoloacutegico en ocasiones se incluye en el PEM del proyecto

No deben confundirse los procedimientos admi-nistrativos en relacioacuten con el patrimonio cultural que en ocasiones por la operativa de las obras obliga a que el propio contratista gestione las au-torizaciones con las consejeriacuteas correspondientes y se ve obligado a realizar una serie de trabajos previos (prospecciones arqueoloacutegicas sondeos etc) con personal propio o contratado con la cualificacioacuten exigida por las administraciones competentes Estas otras actividades relaciona-das con la obtencioacuten de algunos permisos admi-nistrativos por parte del promotor yo contratista suponen un coste con elevada probabilidad de ser asumido por este uacuteltimo y por inercia con frecuencia suele incluirse el seguimiento arqueo-loacutegico de las obras como una maacutes de estas activi-dades en el PEM Sin embargo no es loacutegico que la vigilancia en obra arqueoloacutegica o de cualquier otra naturaleza sea dirigida por el contratista ni que se incluya como una unidad del PEM Aunque es una materia especiacutefica no tratada en este libro a semejanza de cualquier otro factor ambiental el seguimiento arqueoloacutegico podriacutea formar parte del PVA y valorarse en el presupuesto de inversioacuten

iquestPuede intervenir en el PS el mismo equipo que en el PVA

Tanto el PS como el PVA deben llevarlo a cabo especialistas en cada variable ambiental o medi-da correctora y la participacioacuten en una de las fases no tiene por queacute inhabilitar a un equipo para poder participar en la otra si su cualificacioacuten es adecuada

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IacuteNDICE

VII CONCLUSIONES

La vigilancia y el seguimiento de las actividades y proyectos sometidos a EIA forman parte del pro-cedimiento por tanto no es bueno que el oacutergano ambiental se desligue en ninguna fase del mismo como la praacutectica demuestra que viene sucediendo en determinados proyectos y Administraciones

A pesar del trascurso de los antildeos sigue existiendo mu-cha distancia entre la teoriacutea de los modelos multidiscipli-nares y participativos y su aplicacioacuten praacutectica y deberiacutean aprovecharse las mejores experiencias conocidas para introducir mejoras en los protocolos de funcionamiento

El elevado nivel de detalle de las medidas correcto-ras de impacto ambiental y de los PVA incluidos en los proyectos de construccioacuten carece de eficacia si no se implementan con el mismo nivel de exigencias y supervisioacuten que la redaccioacuten de los proyectos

La dispersioacuten de la informacioacuten y documentos ema-nados de la fase de seguimiento y vigilancia am-biental es una debilidad del sistema que requiere

corregirse La creacioacuten de comisiones mixtas en di-cha fase permitiriacutea el acceso aacutegil a los resultados facilitando que el procedimiento se nutra de datos reales y verificados

La consideracioacuten de principios de economiacutea ambien-tal aplicados a la optimizacioacuten de los recursos puacute-blicos y privados hace recomendable promover la interrelacioacuten entre los procesos de calidad de las empresas con la EIA poniendo en valor los que re-sulten complementarios

La retroalimentacioacuten de los procesos permitiriacutea in-troducir mejoras funcionales en el disentildeo de las me-didas correctoras de impacto ambiental reforzando directamente la utilidad del procedimiento de EIA Para solventar la actual falta de acceso por parte de los propios actores a los datos teoacutericamente exis-tentes por casi 25 antildeos de vigilancia y seguimiento ambiental en Espantildea se percibe que la creacioacuten de comisiones multidisciplinares resultariacutea una herra-mienta aacutegil y eficaz

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10Legislacioacuten

Carlos Iglesias Luis Balaguer Ignacio Mola y Valentiacuten Alfaya

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IacuteNDICE

CAPIacuteTULO 10 Legislacioacuten

Carlos Iglesias Luis Balaguer Ignacio Mola y Valentiacuten Alfaya

I INTRODUCCIOacuteN Y OBJETIVOS

En coherencia con el pragmaacutetico deseo general ex-presado en el resto del libro este capiacutetulo de Legis-lacioacuten se concibe con la idea de ofrecer una visioacuten comentada de normas relevantes cuyo contenido tiene influencia directa sobre el disentildeo de los tra-tamientos de restauracioacuten de infraestructuras de transporte su mantenimiento y el seguimiento de estas medidas correctoras confiando en que resul-ten de utilidad para los agentes que intervengan en las distintas fases de los procesos de planificacioacuten proyecto construccioacuten y explotacioacuten de las mismas si bien no es pretensioacuten de sus autores confeccionar un listado interminable sobre materia legal aplicable al aacutembito de las infraestructuras de transporte ni sobre su restauracioacuten o la de zonas afectadas por su ejecucioacuten y funcionamiento

Dicho enfoque responde al convencimiento de la escasa utilidad que hoy en diacutea tiene el formato tradicional de elaborar interminables listados de normas maacutes o menos relacionadas con la redac-cioacuten de proyectos no tanto por la inevitable ca-ducidad de muchas normas a corto y medio plazo como por las facilidades de acceso que ofrece In-ternet a numerosas paacuteginas web oficiales donde se ofrece dicha informacioacuten actualizada en tiempo real

En este capiacutetulo se pone de relieve la estrecha re-lacioacuten entre normas dispares y en ocasiones el conflicto que se genera entre distintas normas que

pueden determinar la toma de decisiones aunque a veces la falta de consideracioacuten de algunas de ellas compromete el eacutexito de las medidas correctoras como por ejemplo suele ocurrir cuando se ignoran las labores de conservacioacuten y mantenimiento que inevitablemente se realizan en algunas aacutereas restau-radas de las infraestructuras

En determinados aacutembitos profesionales la restau-racioacuten de los taludes y otras superficies alteradas se percibe como una tarea repetitiva cuyo disentildeo responde sistemaacuteticamente al mismo esquema con escasas diferencias seguacuten se trate de los taludes de terrapleacuten o desmonte lo cual dista mucho de la rea-lidad de la restauracioacuten ecoloacutegica de estas infraes-tructuras como se ha mencionado repetidamente en este libro Sin embargo cabe resaltar algunos obs-taacuteculos legales con los que se pueden encontrar los teacutecnicos a la hora de promover y defender algunas ideas novedosas en sus proyectos de restauracioacuten pese a que puedan basarse en los datos de expe-riencias previas o en la literatura cientiacutefica que em-pieza a abundar al respecto Es una responsabilidad de las Administraciones crear un marco favorable de actuacioacuten en el que se integren los distintos puntos de vista incentivando las decisiones motivadas y adecuadas a los fines establecidos en sus propias actuaciones y poliacuteticas

Antes de finalizar este apartado de introduccioacuten conviene recordar el artiacuteculo 45 de la Constitucioacuten

Espantildeola (en adelante CE) que preveacute la proteccioacuten del medio ambiente como labor de los poderes puacute-blicos velando por la utilizacioacuten racional de todos los recursos naturales con el fin de proteger y me-jorar la calidad de la vida y defender y restaurar el medio ambiente con el apoyo de la indispensable solidaridad colectiva Responsabilidades puacuteblicas ar-ticuladas en el punto 14819 de la CE que atribuye a las comunidades autoacutenomas la competencia de ges-tioacuten en materia de proteccioacuten del medio ambiente correspondiendo al Estado la competencia exclusiva para establecer la legislacioacuten baacutesica en dicha mate-ria (art 149123) Cabe destacar en el enunciado del citado artiacuteculo de la CE su acierto visionario al vincular la calidad de vida de los ciudadanos con la restauracioacuten del medio ambiente anticipaacutendose asiacute a la definicioacuten formal de los objetivos de la restau-racioacuten ecoloacutegica que actualmente se centran en la reposicioacuten de valores bienes y servicios a las pobla-ciones humanas

A continuacioacuten se agrupan las normas recopiladas con la filosofiacutea comentada en esta introduccioacuten para ello se han organizado seguacuten materias con la pretensioacuten de facilitar su consulta a los equipos re-dactores de proyectos Aunque en cada apartado se trata de respetar el orden jeraacuterquico de las normas quizaacutes parezca desordenado en alguacuten punto porque no en todas las materias existen normas a todos los niveles o bien no se han encontrado datos resentildea-bles en todas las normas que existen

II LEGISLACIOacuteN SECTORIAL CARRETERAS Y FERROCARRILES

1 Ideas baacutesicas

La CE atribuye al Estado la competencia exclusiva para establecer la legislacioacuten baacutesica entre otras ma-terias sobre ferrocarriles y transportes terrestres que transcurran por el territorio de maacutes de una comuni-dad autoacutenoma (art 149121) y ademaacutes la compe-tencia exclusiva en obras puacuteblicas de intereacutes general o cuya realizacioacuten afecte a maacutes de una comunidad autoacutenoma (art 149124) Teniendo en cuenta la or-ganizacioacuten del Estado y los procesos de descentra-lizacioacuten administrativa en materia de carreteras el marco legal se encuentra constituido por una Ley estatal de carreteras (Ley 251988 BOE nordm 182 de 30 de julio de 1988) un Reglamento de carreteras (RD 18121994 BOE nordm 228 de 23 de septiembre de 1994) que desarrolla la anterior junto a sus posterio-res modificaciones y diecisiete normas autonoacutemicas

con rango de ley en algunos casos desarrolladas por sus propios reglamentos y en otros complementa-das con decretos por los que se aprueban instruccio-nes teacutecnicas como por ejemplo las referentes a los firmes Aunque en el caso que nos ocupa resultaraacute de particular intereacutes rescatar maacutes adelante la Orden Ministerial de 21 de marzo de 1963 por la que se aprueba la Instruccioacuten de la Direccioacuten General de Carreteras 71 ndash IC sobre lsquoPlantaciones en las zonas de servidumbre de las carreterasrsquo auacuten en vigor pese al olvido al que se encuentra sometida quizaacutes por obsoleta y por resultar de escasa aplicabilidad a los proyectos de las modernas carreteras

Finalmente el artiacuteculo 40 del Reglamento Gene-ral de Carreteras (RD 18121994) establece que sin perjuicio de los reglamentos teacutecnicos de aacutem-bito general que sean de aplicacioacuten el ahora

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IacuteNDICE

denominado Ministerio de Fomento a propuesta de la Direccioacuten General de Carreteras aprobaraacute las normas e instrucciones teacutecnicas a las que de-ban sujetarse los trabajos y obras de construc-cioacuten de las carreteras estatales las cuales debe-raacuten revisarse perioacutedicamente para su actualizacioacuten permanente debieacutendose publicar estas normas e instrucciones en el Boletiacuten Oficial del Estado De este modo la Administracioacuten competente dota de la fuerza necesaria al compendio de normas e ins-trucciones de carreteras que perioacutedicamente se revisan y actualizan Siendo su observancia obli-gatoria por Ley de esta forma determinados cri-terios teacutecnicos prevalecen faacutecilmente sobre otras normas o recomendaciones opuestas o incompati-bles de menor rango o susceptibles de una inter-pretacioacuten maacutes flexible como suele ser frecuente en materia ambiental

2 El paisaje desde las infraestructuras de transporte el entorno en sentido amplio

El empleo de diferentes escalas de trabajo a la hora de considerar el entorno de las infraestructuras de transporte resulta determinante para comprender sus efectos sobre el medio En este sentido desde hace ya bastantes antildeos en la literatura cientiacutefica abundan los trabajos que promueven el enfoque sisteacutemico a diferentes escalas para comprender los posibles procesos afectados base de buena parte de los contenidos de los capiacutetulos anteriores de este libro

En sentido inverso simultaacuteneamente proliferan los trabajos de interpretacioacuten y acceso al paisaje desde las infraestructuras de transporte En este aacutembito ha adquirido notable relevancia la Ley 51996 de Carreteras de Cantabria (BOE nordm 51 de 28 de fe-brero de 1997) que en su artiacuteculo 26 preveacute que puedan ser declaradas como carreteras o tramos de especial proteccioacuten entre otros las carreteras o tramos parciales de importancia por su funcioacuten te-rritorial o debido a sus condiciones medioambien-tales Debiendo ser declaradas en cualquier caso como carreteras singulares de especial proteccioacuten ecoloacutegica y paisajiacutestica aquellas que atraviesen es-pacios naturales protegidos afecten a bienes de intereacutes cultural puedan alterar las condiciones de los paisajes naturales o culturales preexistentes o pongan en peligro los testimonios etnograacuteficos de la cultura material popular

En coherencia con ello en la Comunidad Autoacutenoma de Cantabria ademaacutes han promulgado el Decreto 612004 sobre carreteras de especial proteccioacuten por atravesar espacios naturales protegidos de Can-tabria (BOC nordm 121 de 24 de junio de 2004) donde se contempla que para la definicioacuten de las medidas de integracioacuten ambiental se deacute prioridad al empleo de la vegetacioacuten como elemento constructivo de manera aislada o en combinacioacuten con materiales inertes asiacute como al uso de materiales tradicionales de cada zona

Otro caso destacable es el de la Comunidad Au-toacutenoma de Andaluciacutea que cuenta con un cataacute-logo de 44 carreteras paisajiacutesticas que se ex-tienden a lo largo de 1666 km de recorrido y contempla que con el objeto de conservar o potenciar el caraacutecter paisajiacutestico de las carrete-ras destinadas a acoger funciones relacionadas con el acceso y disfrute del paisaje se planteen dos posibles estrategias a implementar en los proyectos de adecuacioacuten y mejora de estas in-fraestructuras

La primera de ellas se basa en la utilizacioacuten de disentildeos materiales y soluciones teacutecnicas que alu-dan a patrones o caracteriacutesticas formales reconoci-bles en el entorno viario mientras que la segunda pasa por mejorar el diaacutelogo entre la carretera y determinados elementos singulares situados en sus maacutergenes construcciones tradicionales arbo-lado en las maacutergenes muros de piedra etc (CEPT 2009)

En otro aacutembito geograacutefico con base en la Ley 21983 de alta montantildea (DOGC n 312 del 16 de marzo de 1983) de la Generalidad de Cataluntildea se han elaborado las recomendaciones teacutecnicas para el disentildeo sostenible de carreteras de montantildea con el objeto de que la dotacioacuten de infraestruc-turas en este medio no resulte en detrimento de los valores naturales del entorno ni del potencial turiacutestico de la propia infraestructura En ellas se efectuacutea una serie de recomendaciones sobre los elementos que conforman las carreteras a menu-do por debajo de los umbrales que fija la Norma 31-IC de trazado tratando de no renunciar por ello a la seguridad

Por uacuteltimo aunque no constituyen un texto legal la Junta de Andaluciacutea ha elaborado a traveacutes de la empresa puacuteblica GIASA dependiente de la Con-sejeriacutea de Obras Puacuteblicas unas recomendaciones teacutecnicas para el disentildeo y ejecucioacuten de sistemas viarios en medios sensibles con el objeto de ser considerado por proyectistas y teacutecnicos durante la fase de obras de estas infraestructuras (JAOPGIASA 2006)

3 El entorno inmediato de las infraestructuras de transporte dominio puacuteblico y zonas de servidumbre

Tanto la legislacioacuten baacutesica de carreteras como la del sector ferroviario establecen en el aacutembito de influencia de dichas infraestructuras la existencia de unas zonas de dominio puacuteblico de servidumbre y de afeccioacuten En estas zonas de proteccioacuten quedan condicionados numerosos usos en funcioacuten de su compatibilidad con los elementos funcionales de las infraestructuras por ejemplo las plantaciones o talas de aacuterboles estando sometidos en algunos casos a la preceptiva autorizacioacuten de la Administra-cioacuten competente Por razoacuten del reacutegimen juriacutedico al que estaacuten sujetos los bienes y derechos que inte-gran el patrimonio de las Administraciones puacuteblicas pueden ser de dominio puacuteblico o demaniales y de dominio privado o patrimoniales de acuerdo con la Ley 332003 del Patrimonio de las Administra-ciones Puacuteblicas (BOE nordm 264 de 4 de noviembre de 2003) Los bienes y derechos de dominio puacuteblico son los que siendo de titularidad puacuteblica se en-cuentren afectados al uso general o al servicio puacute-blico asiacute como aquellos a los que una ley otorgue expresamente el caraacutecter de demaniales

Cuadro 1 Entre otros principios la gestioacuten y administracioacuten de los bienes y derechos patrimoniales por las Administraciones puacuteblicas deben ajustarse a los siguientes

a) Eficiencia y economiacutea en su gestioacuten

b) Eficacia y rentabilidad en su explotacioacuten

c) Transparencia y objetividad en su explotacioacuten

d) Identificacioacuten y control a traveacutes de inventarios o registros adecuados

e) Colaboracioacuten y coordinacioacuten entre las diferen-tes Administraciones puacuteblicas con el fin de optimizar la utilizacioacuten y el rendimiento de sus bienes

Figura 1 La autoviacutea A-4 a su paso por el paisaje singular del desfilade-

ro de Despentildeaperros en la provincia de Jaeacuten (Foto Carlos Iglesias)

Figura 2 El mantenimiento de vegetacioacuten arbustiva en el dominio puacuteblico permite conectar distintos rodales y pasos de fauna en la imagen un tramo de la autoviacutea A-52 (Foto Carlos Iglesias)

La defensa y proteccioacuten del patrimonio de las Adminis-traciones puacuteblicas es una obligacioacuten inherente a ellas siendo la conservacioacuten de los bienes y derechos de dominio puacuteblico competencia del Ministerio u organis-mo puacuteblico al que se encuentren afectados o adscritos o al que corresponda su administracioacuten La Ley preveacute que en el caso de que sobre un bien se impongan una o varias afectaciones concurrentes la participacioacuten de los diversos departamentos u organismos en la con-servacioacuten se podraacute determinar mediante acuerdos o protocolos de actuacioacuten entre ellos (en su defecto la forma de participacioacuten de cada uno la fijariacutea el ministro de Hacienda) Y por uacuteltimo otro aspecto de relevancia a incluir en esta introduccioacuten como mucha gente bien conoce seguacuten el reacutegimen de disponibilidad los bienes y derechos de dominio puacuteblico son inalienables im-prescriptibles e inembargables

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IacuteNDICE

Tabla 1 El dominio puacuteblico viario y las limitaciones a la propiedad en carreteras y ferrocarriles

INFRAESTRUCTURA Y CONSIDERACIONES

DOMINIO PUacuteBLICO

ZONA DE SERVIDUMBRE

LIacuteMITE DE EDIFICACIOacuteN

ZONA DE AFECCIOacuteNPROTECCIOacuteN

Autopistas autoviacuteas y viacuteas raacutepidas

8 metros 25 metros 50 metros 100 metros

Carreteras convencionales

3 metros 8 metros 25 metros 50 metros

Ferrocarriles 8 metros ---------- 50 metros 70 metros

ConsideracionesProhibido plantaciones de arbolado

Autorizable plantaciones de arbolado

----------Autorizables plantaciones de arbolado

Tabla 2 Particularidades sobre el dominio puacuteblico viario y las limitaciones a la propiedad en carreteras

DOMINIO PUacuteBLICO

ASTURIAS Se permiten cultivos y zonas ajardinadas de talla inferior a 05 metros

EXTREMADURA Anchura de 2 m en las carreteras denominadas vecinales

NAVARRA No son autorizables las plantaciones de arbolado

GALICIA No podraacute exceder 15 m de ancho en autopistas autoviacuteas corredores y viacuteas raacutepidas y 10 m de ancho en el resto de las carreteras

ZONA DE SERVIDUMBRE

ISLAS BALEARES Denominada zona de proteccioacuten (18 m de anchura en carreteras de dos carriles de la red primaria y secundaria y de 8 m las de la red local o rural)

CANTABRIADenominada zona de proteccioacuten (18 m en carreteras primarias 14 m en carreteras secundarias y 10 m en las locales)

GALICIA Y NAVARRA Mide 17 m en autopistas autoviacuteas corredores y viacuteas raacutepidas y 2 m en el resto de las carreteras de Galicia desde el dominio puacuteblico y 5 m en el resto de las de Navarra

CATALUNtildeA Se permiten cerramientos arbustivos de talla inferior a 120 m

REGIOacuteN DE MURCIA Se considera 30 m de ancho para las carreteras de segundo y tercer nivel

LIacuteMITE DE EDIFICACIOacuteN

ANDALUCIacuteA Se extiende hasta los 100 m

CASTILLA Y LEOacuteN Posee una anchura de 18 m en carreteras que no sean autopistas autoviacuteas ni viacuteas raacutepidas

LA RIOJA Posee una anchura de 18 m en carreteras que no sean autopistas autoviacuteas ni viacuteas raacutepidas

NAVARRA Posee una anchura de 18 m en carreteras locales

REGIOacuteN DE MURCIA Posee una anchura de 18 m en carreteras de tercer nivel

GALICIA Mide 30 m de autopistas autoviacuteas y viacuteas raacutepidas 12 m en carreteras de la red primaria baacutesica 195 m las de la red primaria complementaria y 7 m en el resto

VIZCAYA Mide 18 m en la red comarcal y complementaria de Vizcaya y 12 m en la red local

ZONA DE AFECCIOacuteN

CASTILLA-LA MANCHA

Denominada zona de proteccioacuten mide 30 m de anchura en carreteras que no sean autopistas autoviacuteas ni viacuteas raacutepidas

ANDALUCIacuteA CASTILLA Y LEOacuteN GALICIA Y VIZCAYA

Mide 25 m en el resto de carreteras

GUIPUacuteZCOA Denominada zona de proteccioacuten mide 30 m de anchura en carreteras que no sean autopistas autoviacuteas ni viacuteas raacutepidas y se prohiacutebe la plantacioacuten y tala de aacuterboles y arbustos Mide 10 m en el caso de caminos

NOTA en la Comunidad de Madrid se establecen solo dos zonas el dominio puacuteblico y la zona de proteccioacuten que posee un ancho de 50 metros en autopistas y autoviacuteas 25 m en las carreteras integradas en la red principal y 15 m en el resto de las redes de la Comunidad de Madrid medidos desde la arista exterior de explanacioacuten

Figura 3 Caracteriacutesticas baacutesicas del dominio puacuteblico viario y las limitaciones a la propiedad en carreteras y ferrocarriles (modificado de Igle-sias Merchaacuten y Herrera Calvo 2008)

DOMINIO PUacuteBLICO anchura variable (8 m tronco de autoviacuteas autopistas viacuteas raacutepidas y FFCC 3 m ctra convencional caminos servicio etc)

DOMINIO PUacuteBLICO

INTERIOR DE LA INFRAESTRUCTURA

ZONA DE AFECCIOacuteN EN CARRETERAS

100 m (50 m ctra convencional)

ZONA DE PROTECCIOacuteN EN FFCC

70 m

LIacuteMITE DE EDIFICACIOacuteN EN CARRETERAS Y FFCC

50 m (25 m ctra convencional)

ZONA DE SERVIDUMBRE EN CARRETERAS

25 m (8 m ctra convencional)

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IacuteNDICE

Ademaacutes de las anteriores referencias al dominio puacute-blico y las limitaciones a la propiedad merece la pena resentildear algunas particularidades relacionadas con el manejo y la gestioacuten de estas zonas y la res-tauracioacuten de las infraestructuras de transporte que se incluyen en algunas normas autonoacutemicas El artiacute-culo 6 de la Ley 82001 de Carreteras de Andaluciacutea (BOJA nordm 85 de 26-7-2001) establece expliacutecitamen-te que la zona de dominio puacuteblico adyacente a las carreteras deberaacute quedar debidamente amojonada e integrada en su medio natural mediante la im-plantacioacuten en ella de las correspondientes actua-ciones de restauracioacuten paisajiacutestica Su artiacuteculo 31 iacutentegramente dedicado al proyecto de restauracioacuten paisajiacutestica establece que se realizaraacute la revegeta-cioacuten del dominio puacuteblico viario y de su entorno sin que necesariamente tenga que estar vinculada su redaccioacuten y ejecucioacuten a las obras de carreteras ni a la contratacioacuten del proyecto de construccioacuten idea no solo aplicada al caso de Andaluciacutea

La segregacioacuten de un proyecto de restauracioacuten respecto del proyecto de construccioacuten de una in-fraestructura es objeto de debate desde hace mu-cho tiempo sin que se conozcan los resultados ni valoraciones de las experiencias realizadas en ocasiones promovidas en aacutembitos geograacuteficos dis-tintos de Andaluciacutea En todo caso es una cuestioacuten contradictoria con la esencia de la EIA que preci-samente pretende que los proyectos de restaura-cioacuten de las actividades evaluadas formen parte de los proyectos de construccioacuten si bien la Ley an-daluza emplea dos teacuterminos integracioacuten ambien-tal y restauracioacuten paisajiacutestica con la intencioacuten de establecer una diferencia entre la ejecucioacuten de las medidas preventivas y correctoras establecidas en la declaracioacuten ndasho informendash de impacto ambien-tal (integracioacuten ambiental) de aquellas otras adi-cionales que persigan la revegetacioacuten del dominio puacuteblico viario y del entorno afectado (restauracioacuten paisajiacutestica) Para ello la legislacioacuten andaluza pre-veacute que la Administracioacuten pueda utilizar la zona de servidumbre para cuantas actuaciones requiera el intereacutes general y el mejor servicio del dominio puacuteblico viario incluida la integracioacuten paisajiacutestica de la carretera

En este sentido la Ley de Carreteras de la Comuni-dad de Madrid (Ley 31991 BOCM de 21 de marzo de 1991) incluye una referencia al medio ambiente en la fase de su explotacioacuten pues en su artiacuteculo 25 determina que a la explotacioacuten de las carreteras comprende entre otras labores las de restauracioacuten y proteccioacuten medioambientales necesarias y estable-cidas en el ordenamiento juriacutedico vigente

Respecto a la posibilidad de autorizarse la plantacioacuten o tala de aacuterboles en zonas de servidumbre y afeccioacuten de las carreteras destaca la mencioacuten adicional a los arbustos en el Decreto Foral Normativo 12006 de Carreteras y Caminos de Gipuzkoa (BOG nordm 117 de 21 de junio de 2006) recogido en la tabla 2

Tambieacuten se puede destacar como una referencia a los efectos sobre el medio ambiente de las carrete-ras durante su fase de explotacioacuten el artiacuteculo 28 de la Ley 22008 de Carreteras de la Regioacuten de Murcia (BORM nordm 111 de 14 de mayo de 2008) que faculta a la consejeriacutea competente en materia de carreteras para ordenar el traacutefico (aunque solo el traacutefico pesa-do) por motivos ambientales entre otros

Figura 4 Algunas carreteras se caracterizan por un denso traacutefico de vehiacuteculos pesados La Legislacioacuten de la Regioacuten de Murcia permite su ordenacioacuten en funcioacuten de criterios de caraacutecter ambiental Imagen de la carretera N-232 en La Rioja (Foto Carlos Iglesias)

Aunque la norma que se muestra particularmente in-fluyente sobre los usos del suelo en su entorno es la Ley 51990 de Carreteras de la Comunidad Autoacuteno-ma de las Islas Baleares (BOE nordm 184 de 2 de agosto de 1990) puesto que preveacute que los planes de carre-teras o los urbaniacutesticos que incluyan carreteras fijen en su caso una zona de reserva para ampliacioacuten o mejora de las carreteras cuya anchura miacutenima seraacute

a) 100 metros para viacuteas de cuatro o maacutes carriles

b) 50 metros para viacuteas de dos carriles de las redes primaria y secundaria

c) 25 metros para viacuteas de dos carriles de las redes local o rural

En la zona de reserva se prohibiraacute la ejecucioacuten de cualquier tipo de obra o instalacioacuten que no sean las de mera conservacioacuten de las existentes y tam-bieacuten cualquier otra clase de actividades que puedan

elevar el valor del suelo excepto los de cultivos agriacute-colas Ademaacutes las anchuras descritas se incremen-taraacuten en un 50 cuando se trate de carreteras de nuevo trazado

Sin embargo en Baleares se contempla que las la-bores agriacutecolas no tengan ninguna restriccioacuten fuera de la zona de dominio puacuteblico excepto en el caso de que con ellas pueda verse comprometido el traacute-fico en concreto Solo en este caso seraacute preceptiva la autorizacioacuten del organismo titular de la carretera para la plantacioacuten o tala de arbolado y la recogida y evacuacioacuten de los productos cuando se realicen a una distancia menor de 3 metros de la arista de la explanacioacuten y esta pueda verse afectada

4 Plantaciones en las zonas de servidumbre de las carreteras Instruccioacuten 71-IC

En la introduccioacuten de este mismo capiacutetulo se ha in-cluido una breve referencia al marco general legal en materia de infraestructuras de transporte par-ticularmente en el caso de las carreteras Conviene recordar que la legislacioacuten baacutesica del Estado Ley y Reglamento de Carreteras tienen continuidad en diecisiete normas autonoacutemicas con rango de ley En algunos casos desarrolladas por sus propios regla-mentos y ademaacutes complementadas ambos con de-cretos y oacuterdenes por las que se aprueban por ejem-plo instrucciones teacutecnicas de obligado cumplimien-to en distintas fases de la planificacioacuten proyecto y explotacioacuten de las infraestructuras de transporte En este sentido resulta de particular intereacutes en este

La instruccioacuten 71-IC establece una serie de normas y recomendaciones a tener en cuenta en las plantaciones que se efectuacuteen en la zona de servidumbre de las carre-teras a las que atribuye funciones ligadas a una concep-cioacuten de los trazados y de la conduccioacuten propias de hace cuatro deacutecadas como orientar el traacutefico proporcionar zonas de sombra y descanso a los viajeros y de orden esteacutetico como es la integracioacuten de las carreteras en el paisaje que atraviesa la valoracioacuten de determinados puntos de vista o la ocultacioacuten de aquellos que no resul-taran agradables Sin embargo tambieacuten atribuye a las plantaciones a lo largo de las carreteras la posibilidad de cumplir simultaacuteneamente otras funciones como conte-ner taludes y evitar la erosioacuten Como aspectos singulares de la norma destaca la recomendacioacuten de no plantar aacuterboles cuando la carretera atraviese o esteacute proacutexima a bosques o plantaciones de frutales y en todo caso que las plantaciones permitan la visioacuten del paisaje

Figura 5 Algunas declara-ciones de impacto ambien-tal establecen la condicioacuten de proyectar plantaciones arboacutereas para ocultar ele-mentos constructivos como pilares pantallas acuacutesticas etc pese a situarse en una zona donde la legislacioacuten vigente prohiacutebe este tipo de restauraciones (Foto Carlos Iglesias)

libro recordar la existencia de la Orden Ministerial de 21 de marzo de 1963 por la que se aprueba la Instruccioacuten de la Direccioacuten General de Carreteras 71-IC sobre lsquoPlantaciones en las zonas de servidumbre de las carreterasrsquo

Esta norma auacuten permanece en vigor pese al ol-vido al que se encuentra sometida por lo que convendriacutea recordar que el Reglamento General de Carreteras (RD 18121994) contempla la nece-sidad de revisar perioacutedicamente para su actua-lizacioacuten permanente las normas e instrucciones teacutecnicas a las que deban sujetarse los trabajos y obras de construccioacuten de las carreteras esta-tales

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Figura 6 Primera paacutegina de la instruccioacuten de carreteras 71-IC publicada en el BOE de 8 de abril de 1963 y actualmente vigente Sus carac-teriacutesticas histoacutericas compensan la pobreza graacutefica de la figura pero no la escasa aplicabilidad de la norma

Aunque es una norma desactualizada difiacutecilmen-te aplicable a las modernas infraestructuras de transporte estaacute salpicada de frases de completa vigencia como la importancia que otorga a la ar-monizacioacuten de la infraestructura con el paisaje particularmente en aquellas zonas caracterizadas por la ausencia de vegetacioacuten Tambieacuten es cierto que resalta la importancia de una adecuada selec-cioacuten de especies tanto en lo que a su funcioacuten se refiere como a su conservacioacuten recomendaacutendose la adopcioacuten de las especies caracteriacutesticas de la regioacuten

La existencia de una norma de casi 40 antildeos de anti-guumledad dedicada a establecer los principios baacutesicos de la integracioacuten ambiental de las infraestructuras de transporte en Espantildea en un hecho singular que revela la intencioacuten renovadora y probablemente el empuje de un grupo de teacutecnicos comprometidos en su esfuerzo por comprender la relacioacuten de las infraestructuras de transporte con su entorno casi 25 antildeos antes de la transposicioacuten al ordenamien-to juriacutedico espantildeol de las primeras Directivas euro-peas en materia de evaluacioacuten ambiental En todo caso teniendo en cuenta los ritmos del progreso el periacuteodo de tiempo transcurrido y la inevitable caducidad de las normas cuando dejan de ajustarse a la realidad cambiante convendriacutea recordar a las Administraciones sus responsabilidades en cuanto a

la necesaria revisioacuten de las normas para su adecua-cioacuten al progreso teacutecnico y cientiacutefico

5 Instrucciones y Recomendaciones en los proyectos de alta velocidad

El Administrador de Infraestructuras Ferroviarias (ADIF) es una entidad puacuteblica empresarial depen-diente del Ministerio de Fomento que entre sus en-comiendas tiene la redaccioacuten de proyectos cons-truccioacuten y puesta en servicio entre otras de las liacuteneas de alta velocidad Como parte integrante del Sistema de Gestioacuten de la Calidad adoptado por el ADIF se encuentran las Instrucciones y Recomen-daciones para la redaccioacuten de los proyectos de la plataforma de liacuteneas de alta velocidad ferroviaria conocidas como IGP cuya uacuteltima revisioacuten se ha lle-vado a cabo durante el antildeo 2010 para actualizar las hasta ahora denominadas IGP-2008 Con ellas se pretende favorecer la homogeneidad en la interpre-tacioacuten a los criterios aplicados por los proyectistas asiacute como facilitar la actualizacioacuten ordenacioacuten y ar-chivo sistemaacutetico de las instrucciones que con este fin se distribuyen y actualizan por el propio ADIF perioacutedicamente Maacutes recientemente la DG de Infra-estructuras Ferroviarias del Ministerio de Fomento estaacute desarrollando a semejanza de las citadas IGP un manual para la redaccioacuten de proyectos si bien

en este capiacutetulo se detallan algunos aspectos de las IGP de ADIF maacutes utilizadas hasta la fecha

Los redactores de proyectos quedan obligados a consultar estas Instrucciones y Recomendaciones y en caso necesario soliciten del ADIF las aclaraciones oportunas no tanto en la interpretacioacuten y aplicacioacuten de la normativa oficialmente vigente sino por los posibles conflictos con el texto de algunas declara-ciones de impacto ambiental

Cuadro 2 El capiacutetulo 6 de las IGP estaacute reservado al medio ambiente y consta de los siguientes documentos a considerar durante la redaccioacuten de un proyecto de construccioacuten

IGP-61 Guiacutea de prescripciones ambientales para los proyectos de construccioacuten

IGP-62 Programa tipo de vigilancia ambiental

IGP-63 Criterios para la valoracioacuten del coste ambiental

IGP-64 Estudio para la prevencioacuten de ruidos y vibraciones

Estas Instrucciones contienen una relacioacuten de criterios teacutecnicos que sirven de directrices para la coordinacioacuten en el disentildeo de las medidas de proteccioacuten y correc-cioacuten ambiental de los proyectos de las liacuteneas de alta velocidad estructurados seguacuten los principales facto-res ambientales que se contemplan habitualmente en las DIA del Ministerio de Medio Ambiente y ahora tambieacuten de Medio Rural y Marino Las directrices de coordinacioacuten constituyen un intento ambicioso por servir de marco general de homogeneizacioacuten en la redaccioacuten de proyectos aunque sin descender a deta-lles de disentildeo teacutecnico que entran en la competencia de los respectivos proyectistas Por ejemplo en el apartado dedicado a la recuperacioacuten y utilizacioacuten de tierra vegetal queda definida esta como todo aquel material procedente de excavacioacuten cuya composicioacuten fiacutesico-quiacutemica y granulomeacutetrica permita el estableci-miento de una cobertura herbaacutecea permanente (al menos inicialmente mediante las teacutecnicas habituales de hidrosiembra) y sea susceptible de recolonizacioacuten natural Se preveacute su retirada selectiva mantenimiento y conservacioacuten Sin embargo se sigue proponiendo la reextensioacuten de un espesor promedio de 30 cm de tierra vegetal sobre las superficies a restaurar cues-tioacuten discutida desde hace tiempo y sobre la que se aclaran bastantes ideas preconcebidas al respecto en el capiacutetulo 4 de este libro

Figura 7 Las directrices de coordinacioacuten constituyen un intento ambicioso por servir de marco general de homogeneizacioacuten en la redaccioacuten de proyectos de liacuteneas de alta velocidad Imagen de un tren saliendo de un falso tuacutenel de la liacutenea Madrid-Valladolid junto al monte de El Pardo (Foto Carlos Iglesias)

En las IGP ocupan un espacio destacado todas las medidas a proyectar en relacioacuten con la proteccioacuten de la fauna en especial se incluyen referencias expliacutecitas para incorporar al proyecto los criterios de los docu-mentos para la reduccioacuten de la fragmentacioacuten de haacute-bitats del Ministerio de Medio Ambiente y Medio Rural y Marino (MMA 2006 MARM 2008 y MARM 2010)

En cuanto a la restauracioacuten vegetal se refiere se contempla que en cada caso se tendraacute que ser coherente tanto desde el punto de vista ecoloacutegico como paisajiacutestico con el territorio atravesado pre-tendiendo que se trate el terreno alterado y espe-cialmente los taludes con el aspecto y composicioacuten vegetal predominante lo maacutes parecidos posible a los existentes antes de las obras Los tratamientos muy intensivos maacutes propios de jardineriacutea se reservan para zonas urbanas o periurbanas el resto de los tratamientos vegetales deberaacute integrarse adecuada-mente en el medio atravesado

A la restauracioacuten vegetal se le otorgan los objetivos ecoloacutegicos paisajiacutesticos (integracioacuten y ocultacioacuten de vistas poco esteacuteticas) y de control de la erosioacuten de las superficies desnudas generadas por las obras Ademaacutes se recomienda la realizacioacuten de estudios en detalle de la vegetacioacuten a lo largo de la traza para lo-calizar la flora de intereacutes para su proteccioacuten y detectar las especies del lugar susceptibles de ser utilizadas en la revegetacioacuten Respecto a la seleccioacuten de espe-cies se incluye una serie de factores a considerar si bien auacuten se permanece lejos de reflejar la necesidad y el modo en que se debe acopiar este material de la propia zona con la antelacioacuten suficiente

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IacuteNDICE

Figura 8 Ejemplares de Erodium celtibericum en un vivero de obra en alta montantildea (Fuente Castellana Ribas y Riaza Lujaacuten 2010) (Foto FOLIA Consultores)

Aunque se proponen diversos modelos de restaura-cioacuten tambieacuten se recuerda que las plantaciones ar-boacutereas propuestas en proyecto deberaacuten adecuarse al RD 23872004 es decir al Reglamento del Sector Fe-rroviario (BOE nordm 315 de 31 de diciembre de 2004) Esto significa que se prohiacutebe la plantacioacuten de arbo-lado en zona de dominio puacuteblico de acuerdo con el artiacuteculo 30 apartado 2a si bien podriacutean autorizarse

en la zona de proteccioacuten aunque esta excede las po-sibilidades del proyecto y del propio administrador de la infraestructura a los efectos de su restauracioacuten ambiental Las IGP tambieacuten establecen la obligacioacuten de hacer un inventario del arbolado autoacutectono de intereacutes afectado debieacutendose atender a su tamantildeo estado y posibilidades de arraigo tras su trasplan-te consideracioacuten que no deberiacutea interpretarse como la obligacioacuten de proponer en proyecto el trasplante indiscriminado en nuacutemero y especies de cualquier ejemplar afectado por la construccioacuten de estas infra-estructuras

En su apartado 282 las IGP ofrecen una serie de criterios para el mantenimiento de la vegetacioacuten im-plantada en zonas restauradas donde se sugieren incluso las labores de riego abonados escardas binas y podas recordando la importancia de que todos estos trabajos tengan su reflejo apropiado en el correspondiente capiacutetulo del presupuesto del proyecto En todo caso la confeccioacuten de unas ins-trucciones actualizadas perioacutedicamente permite la incorporacioacuten de criterios adecuados a la realidad de los proyectos de las liacuteneas de alta velocidad que ademaacutes se pueden extrapolar a otras infraestructu-ras de transporte

III TEMAS AMBIENTALES

1 Evaluacioacuten ambiental

La Directiva comunitaria 85337CEE (DO L 17540 de 5 de julio de 1985) considera entre otros aspec-tos que los efectos de un proyecto sobre el medio ambiente deben evaluarse para proteger la salud humana contribuir mediante un mejor entorno a la calidad de vida velar por el mantenimiento de la diversidad de especies y para conservar la capacidad de reproduccioacuten del sistema como recurso funda-mental de la vida La incorporacioacuten en Espantildea de esta Directiva 85337CEE al Derecho interno estatal se efectuoacute mediante el RDL 13021986 (BOE nordm 155 de 30 de junio de 1986) que experimentoacute sucesivas modificaciones y el Reglamento que lo desarrolla el RD 113188 (BOE nordm 239 de 5 de octubre de 1988) Con posterioridad el RDL 12008 (BOE nordm 23 de 26 de enero de 2008) por el que se aproboacute el texto re-fundido de Ley de evaluacioacuten de impacto ambiental (EIA) de proyectos derogaba el RDL 13021986 y sus modificaciones y finalmente el RDL 12008 ha sido a su vez modificado por la reciente Ley 62010 (BOE nordm 73 de 25 de marzo de 2010) Simultaacuteneamente

la Directiva 85337CEE ha sido modificada por las Directivas 9711CE (DO L 73 de 14 de marzo de 1997) y 200335CE (DO L 56 de 25 de junio de 2003)

En la actualidad praacutecticamente la totalidad de los proyectos de infraestructuras de transporte puacutebli-cos y privados que correspondan a autopistas y autoviacuteas viacuteas raacutepidas y carreteras convencionales de nuevo trazado modificacioacuten del trazado o du-plicaciones de calzada de otras existentes en una longitud continuada de maacutes de 10 km y las liacuteneas de ferrocarril para traacutefico de largo recorrido deben someterse a EIA en la forma prevista en la Ley mien-tras que la obligatoriedad de someter a EIA el resto de carreteras y liacuteneas ferroviarias que quedan fuera del aacutembito competencial del Estado y no reuacutenan las anteriores caracteriacutesticas se determina en las corres-pondientes normativas autonoacutemicas

De modo general el proyecto para el tratamiento de los espacios afectados por las obras se articu-la en torno a los potenciales impactos ambientales

Desde los Reales Decretos 13021986 y 11311988 se establece que las EIA deben proponer las actuacio-nes necesarias para evitar reducir o compensar los efectos ambientales negativos significativos Estas acciones reciben el nombre de medidas preventivas (o protectoras) correctoras y compensatorias res-pectivamente La legislacioacuten baacutesica de EIA sumada a sus homoacutelogas autonoacutemicas extiende el dominio de aplicacioacuten de estas definiciones al aacutembito de las infraestructuras lineales que desde el punto de vis-ta de la ecologiacutea de la restauracioacuten en el antildeo 1998 se definiacutea como un gigante dormido por Forman y Alexander gigante por la extensioacuten de superficie afectada y la trascendencia de la adopcioacuten de crite-rios ecoloacutegicos y dormido por la exigua repercusioacuten de sus planteamientos aseveraciones difiacuteciles de mantener en la actualidad

2 Responsabilidad ambiental

El reciente reacutegimen europeo de responsabilidad am-biental uno de los cambios maacutes relevantes del de-recho ambiental europeo en los uacuteltimos antildeos pue-de tener implicaciones muy relevantes en materia de restauracioacuten ecoloacutegica Aunque la obligacioacuten de restaurar el medio natural afectado por un dantildeo ya estaba presente en la legislacioacuten ambiental su dis-persioacuten por todo el reacutegimen sectorial haciacutea difiacutecil su efectiva puesta en praacutectica Con el nuevo reacutegimen transpuesto a nuestro ordenamiento juriacutedico por me-dio de la Ley 262007 (BOE nordm 255 del 24 octubre 2007) y el RD 20902008 (BOE nordm 308 del 23 de diciembre de 2008) un operador que ha causado un dantildeo significativo tiene la obligacioacuten de reparar este dantildeo y restaurar el medio afectado con una respon-sabilidad que en teacuterminos econoacutemicos es ilimitada

El otro aspecto relevante consiste en que tal repara-cioacuten no puede hacerse de cualquier modo sino que debe asegurar el retorno de los sistemas naturales hasta lo que se define en el texto normativo como lsquoestado baacutesicorsquo esto es lsquoaquel en el que de no ha-berse producido el dantildeo medioambiental se habriacutean hallado los recursos naturales y los servicios en el momento en que sufrieron el dantildeorsquo Desde nues-tro punto de vista esta definicioacuten juriacutedica estaacute muy proacutexima al concepto de lsquorestauracioacuten ecoloacutegicarsquo y abre el reto de la restauracioacuten de los procesos eco-loacutegicos como leit motiv de estas actuaciones

En los uacuteltimos cuatro antildeos se declararon a las com-pantildeiacuteas de seguros casi dos centenares de sinies-tros que implicaban un dantildeo ambiental relevante Una parte importante de ellos requirioacute medidas de

restauracioacuten del lsquomedio naturalrsquo Una vez que el nue-vo reacutegimen ha entrado en vigor es razonable pensar que en los proacuteximos antildeos se mantengan o incremen-ten los procedimientos administrativos para exigir la obligacioacuten de restaurar y que esta exigencia legal se convierta en una palanca que extienda la restaura-cioacuten con criterios ecoloacutegicos como alternativa viable a los enfoques maacutes tradicionales

3 Biodiversidad

Desde el punto de vista de la planificacioacuten de infra-estructuras resulta obligatorio incluir una referencia al Plan Estrateacutegico de Infraestructuras y Transporte 2005-2020 (PEIT) que define las poliacuteticas que de-ben orientar los proyectos y las grandes liacuteneas de actuacioacuten Este Plan va acompantildeado de un estudio acerca de los efectos conjuntos que ocasionariacutea el PEIT sobre espacios naturales protegidos haacutebitats de intereacutes comunitario y especies fauniacutesticas de inte-reacutes de conformidad con la Directiva 9243 (DO L 206 de 2271992) conocida como Directiva Haacutebitats y la Directiva 79409 (DO L 103 de 2541979) popu-larmente denominada Directiva Aves

Aunque la escala de la planificacioacuten difiere nota-blemente de la que requiere el disentildeo de medidas correctoras al nivel de detalle de un proyecto de construccioacuten no debe obviarse el desarrollo de planes y programas que en ocasiones han adop-tado un enfoque ambiental Este cambio de escala ha sido promovido por la Directiva Haacutebitats la cual insta en su artiacuteculo 10 a fomentar la co-nexioacuten y coherencia ecoloacutegica de la Red Natura 2000 Frente a las medidas que con frecuencia se limitan a la actuacioacuten en franjas laterales es-tos planes y programas se interesan por el efec-to fragmentador de las infraestructuras y por su afeccioacuten a corredores ecoloacutegicos que manteniacutean la conexioacuten entre espacios naturales En el caso del PEIT en el que se basa el actual Plan Extraordi-nario de Infraestructuras (PEI) se valoroacute positiva-mente que no solo evaluara la afeccioacuten directa y ocupacioacuten del territorio sino tambieacuten la fragmen-tacioacuten de haacutebitats utilizando como indicadores el nuacutemero de unidades de vegetacioacuten producidas por divisioacuten de los mismos la superficie media de las teselas resultantes y su coeficiente de forma (relacioacuten periacutemetroaacuterea) Dicho estudio identifi-caba posibles puntos de conflicto que deberiacutean haber servido para orientar las fases siguientes de planificacioacuten y proyecto de las infraestructu-ras Al mismo nivel jeraacuterquico se situaraacute en bre-ve el Plan Estrateacutegico del Patrimonio Natural y

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En los taludes de carretera no solo prosperan especies frecuentes yo de amplia distribucioacuten En la imagen aparece un lirio boca de serpiente (Iris xyphium) y a su derecha un fragmento de la inflorescencia de una arzolla (Thapsia villo-sa) La fotografiacutea estaacute tomada en la parte supe-rior de un desmonte de la carretera M-604 de Madrid En los documentos de trabajo para la actualizacioacuten de Cataacutelogo Regional de Especies Amenazadas de la Flora Silvestre de la Comuni-dad de Madrid se propone su proteccioacuten como especie lsquosensible a la alteracioacuten de su haacutebitatrsquo (Blanco et al 1999) ya que se trata de una es-pecie escasa y de distribucioacuten puntual en este aacutembito territorial Autor Ignacio Mola

Blanco de Castro E (Coor) 1999 Revisioacuten del Cataacutelogo Regional de Especies Amenazadas de la Flora Silvestre de la Comunidad de Madrid Informe ineacutedito incluido en el Plan Forestal de la Comunidad de Madrid

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la Biodiversidad que ademaacutes de ser ob jeto de evaluacioacuten ambiental seguacuten lo dispuesto en la Ley 92006 (BOE nordm 102 del 29 de abril de 2006) sobre evaluacioacuten de los efectos de determinados planes y programas en el medio ambiente se ha sometido a consultas e informacioacuten puacuteblica de acuerdo con el procedimiento de elaboracioacuten del Plan Estrateacutegico que la Ley 422007 (BOE nordm 299 de 14 diciembre 2007) del Patrimonio Natural y de la Biodiversidad regula en su segundo capiacute-tulo El Plan Estrateacutegico del Patrimonio Natural y la Biodiversidad estaacute llamado a convertirse en el principal instrumento para la planificacioacuten de la accioacuten de la Administracioacuten General del Esta-do en la materia y tiene por objeto promover la conservacioacuten el uso sostenible y en su caso la restauracioacuten del patrimonio los recursos natu-rales terrestres y marinos y de la biodiversidad y geodiversidad Entre los principios que inspi-ran el Plan Estrateacutegico resulta obligado mencio-nar la necesaria integracioacuten sectorial es decir la incorporacioacuten de los objetivos y metas para la biodiversidad como parte esencial de todas las poliacuteticas sectoriales nacionales autonoacutemicas y lo-cales en particular aquellas que rigen la gestioacuten del territorio y los recursos naturales entre las que indudablemente destacan las de transporte

A nivel de programas parece oportuno introducir una referencia al Programa Marco Ambiental 2000-2006 que pretendiacutea establecer una Red de Corre-dores Ecoloacutegicos en la Comunidad Autoacutenoma de Euskadi destacable por su innovacioacuten y coheren-cia territorial Los objetivos fundamentales de este programa eran identificar las aacutereas prioritarias para la conexioacuten e integracioacuten territorial de los espa-cios naturales protegidos (corredores ecoloacutegicos) garantizar un grado de conectividad ecoloacutegica entre estos y en el conjunto del territorio establecer las pautas de gestioacuten para la conservacioacuten y mejora de la conectividad ecoloacutegica y finalmente establecer un punto de partida para la integracioacuten de los cri-terios de conectividad en la ordenacioacuten territorial Este programa ha tenido continuidad en el Progra-ma Marco Ambiental de la Comunidad Autoacutenoma de Euskadi 2007-2010 que entre sus liacuteneas principa-les de actuacioacuten incluye el avance en el desarrollo de la red de corredores ecoloacutegicos

En el aacutembito legislativo la anteriormente mencio-nada Ley 422007 del Patrimonio Natural y de la Biodiversidad (BOE nordm 299 de 14 diciembre 2007) define el papel de la conectividad en la conser-vacioacuten de la biodiversidad Las Administraciones Puacuteblicas preveraacuten en su planificacioacuten ambiental

[hellip] mecanismos para lograr la conectividad ecoloacute-gica del territorio estableciendo o restableciendo corredores [hellip] Para ello se otorgaraacute un papel prio-ritario a los cursos fluviales las viacuteas pecuarias las aacutereas de montantildea y otros elementos del territorio lineales y continuos [hellip] con independencia de que tengan la condicioacuten de espacios naturales prote-gidos Circunstancias que ponen de manifiesto la importancia de la restauracioacuten ecoloacutegica de las infraestructuras de transporte y su entorno inme-diato como elementos lineales y continuos Infra-estructuras que a la vez que vertebran el territo-rio causan importantes impactos ambientales en-tre los que destaca la destruccioacuten y fragmentacioacuten de haacutebitats La mitigacioacuten de estos efectos adver-sos es la base del disentildeo de numerosas medidas correctoras de impacto ambiental como las que se han planteado en los capiacutetulos precedentes de este libro

Despueacutes de este breve repaso a planes progra-mas y la referencia obligada a la Ley 422007 del Patrimonio Natural y de la Biodiversidad conviene retornar la escala de proyecto donde debe hacerse una mencioacuten expresa a la serie de documentos para la reduccioacuten de la fragmentacioacuten de haacutebitats cau-sada por infraestructuras de transporte (MMA 2006 MARM 2008 y MARM 2010) coordinado por la Di-reccioacuten General de Medio Natural y Poliacutetica Forestal (antes DG para la Biodiversidad) del Ministerio de Medio Ambiente y Medio Rural y Marino Aunque estos documentos no constituyen un texto legal su utilidad en las distintas fases del ciclo de vida de las infraestructuras se ha sentildealado en el Capiacute-tulo 8 del presente libro Por otro lado cada vez resulta maacutes habitual encontrar la referencia a dicha serie de documentos en el condicionado de las de-claraciones de impacto ambiental obligando asiacute a los proyectistas a tenerlos en cuenta En su nuacuteme-ro maacutes reciente el tercer libro de la serie aborda las fases de planificacioacuten y trazado de carreteras y ferrocarriles por su importancia para aplicar los principios de precaucioacuten y prevencioacuten identifica-dos como momentos clave para reducir los efectos de la fragmentacioacuten de los haacutebitats Desde la cita-da Direccioacuten General se siguen preparando nuevos documentos ordenando y recopilando los cono-cimientos sobre la materia en el momento actual que sirven de orientacioacuten a los teacutecnicos implicados en las distintas fases de redaccioacuten de proyectos Ademaacutes de experiencias reales se recopila infor-macioacuten sobre la utilidad de accesibles herramientas informaacuteticas (Conefor Sensinode Corredor Design Fragstats Alcor etc) que mediante el uso de siste-mas de informacioacuten geograacutefica permiten evaluar los

efectos de las infraestructuras sobre aspectos tales como la conectividad o definir corredores ecoloacutegi-cos analizar la idoneidad del haacutebitat etc

La consideracioacuten de la biodiversidad como variable ambiental abarca muchos maacutes aspectos que exce-den a un proyecto de infraestructuras que por lo general solo pueden ser atendidos en casos ex-cepcionales pero aun asiacute hay algunas cuestio-nes baacutesicas que resultan alarmante desatendidas como por ejemplo las medidas que figuran en el RD 2892003 (BOE nordm 58 de 8 de marzo de 2003) referidas a los materiales forestales de reproduc-cioacuten Si bien en los pliegos de prescripciones teacutecni-cas particulares de los proyectos es frecuente que se incluya una serie de requisitos a cumplir por las plantas y semillas a emplear en las labores de res-tauracioacuten en general referidas a su presentacioacuten aspecto ausencia de heridas etc no es frecuente que se repare en sus caracteriacutesticas fenotiacutepicas y geneacuteticas aunque esto uacuteltimo puede tener profun-das implicaciones en el eacutexito de los proyectos de restauracioacuten y sobre todo en coacutemo estos influyen en los ecosistemas aledantildeos (veacutease Capiacutetulo 6) El caso es que este material ya sea en forma de plan-tas o partes de las mismas cuando se destinan a fines distintos de la selvicultura basta con que porten una etiqueta o documento en el que figure la indicacioacuten lsquono destinado a usos forestalesrsquo para evitar que le sea de aplicacioacuten la citada normativa

4 Incendios forestales

Una buena parte de las formaciones vegetales medi-terraacuteneas deben su configuracioacuten al papel del fuego

(Pausas y Verduacute 2005 2008 Verduacute y Pausas 2007) sin embargo su recurrencia y el origen antroacutepico de la mayoriacutea de ellas obliga a distintas administracio-nes a que se establezcan medidas que condicionan sine die y en el espacio el manejo de la vegetacioacuten en el entorno de las carreteras Las comunidades autoacutenomas tienen transferidas desde la deacutecada de los ochenta las competencias de los planes de pre-vencioacuten y extincioacuten de incendios mientras que las Administracioacuten General del Estado conserva las labo-res de refuerzo de medios seguacuten la Ley 432003 de Montes (BOE nordm 280 de 22 de noviembre de 2003) y su posterior modificacioacuten por la Ley 102006 (BOE nordm 102 de 29 de abril de 2006) Ademaacutes la preven-cioacuten y seguridad en materia de incendios son muy heterogeacuteneas desde el punto de vista competencial en el sentido de que se insertan de forma transver-sal en mayor o menor medida en varios aacutembitos proteccioacuten civil medio ambiente urbanismo indus-tria etc

A modo de ejemplo el Decreto 1301998 (DOGC nordm 2656 de 9 de junio de 1998) de prevencioacuten de incendios forestales en las aacutereas de influencia de las carreteras en Cataluntildea en cuyo preaacutembulo se identifica a las viacuteas de comunicacioacuten proacuteximas a zonas forestales como uno de los lugares de ini-cio de muchos incendios forestales Con motivo de la prevencioacuten para la defensa contra los incendios forestales nos encontramos con una normativa especiacutefica que desarrolla el tratamiento de la ve-getacioacuten en las aacutereas colindantes con las viacuteas de comunicacioacuten para reducir la posibilidad de inicio de fuegos desde estas zonas para lo que se propo-ne reducir la carga de combustible Entendieacutendose por aacutereas de influencia una franja de 500 m que rodea las carreteras las autoviacuteas y las autopistas

Figura 10 Mapa de las regiones de procedencia de pino carrasco (Pinus halepensis) Modificado de BOE 2009

Figura 9 Ejemplo de utilizacioacuten de Conefor Sensinode para determinar la importancia para la conectividad de los haacutebitats con presencia de urogallo (Tetrao urogallus) en Leacuterida Corte-siacutea de Santiago Saura (Pascual y Saura 2008)

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de Cataluntildea sea cual sea su titularidad que trans-curran por terrenos que son forestales incluidos en los teacuterminos municipales declarados de alto riesgo de incendio forestal por el Decreto 641995 (DOGC nordm 2022 de 10 de marzo de 1995) si bien la norma tambieacuten diferencia los trabajos a realizar seguacuten la importancia de la viacutea de comunicacioacuten y el aacuterea que atraviese La citada normativa marca dos tipos de actuaciones a realizar alrededor de

las carreteras disminucioacuten de la carga de combus-tible y acciones sobre la vegetacioacuten maacutes piroacutefila Los organismos responsables de las carreteras o las empresas concesionarias de viacuteas o de elemen-tos funcionales de la carretera quedan obligados a mantener unas zonas de seguridad y de proteccioacuten en las condiciones determinadas en este Decreto en los terrenos que sean de dominio puacuteblico o pro-piedad de la Administracioacuten

Cuadro 3 A los efectos del Decreto 1301998 de la Generalitat de Catalunya se entiende por

a) Zona de seguridad

Franja de terreno libre de vegetacioacuten arbustiva herbaacutecea seca y de restos vegetales muertos En cuanto a la vegetacioacuten arboacuterea no podraacute suponer la continuidad entre las copas de ambos lados de la viacutea como tampoco la de la masa forestal colindante a cada lado La zona de seguridad se define de 1 m de anchura a partir del extremo exterior de la calzada En el caso de existir arcenes pavimentados la zona de seguridad de 1 m seraacute considerada a partir de la arista del pavimento La anchura de la zona de seguridad podraacute ser ampliada excepcionalmente en aquellos tramos de maacuteximo riesgo de incendios forestales la cual deberaacute ser especificada y justificada por la Direccioacuten General del Medio Natural previo informe del organismo responsable de la viacutea Esta anchura deberaacute definirse antes del 31 de diciembre de cada antildeo para poder incorporarla a las previsiones de conservacioacuten

b) Zona de proteccioacuten

Franja de una anchura miacutenima de 3 m en autoviacuteas y autopistas (anchura miacutenima de 2 m en el resto de carreteras) formada por una masa arbolada yo arbustiva clareada que evite la continuidad vertical y horizontal entre los estratos arbustivo y arboacutereo El recubrimiento de la masa arboacuterea deberaacute ser inferior al 75 del total En todos los casos esta distancia se contaraacute a partir de la liacutenea externa de la zona de seguridad definida anteriormente

Llegados a este punto conviene introducir algu-na duda sobre el papel de las infraestructuras de transporte en el origen de los incendios foresta-les diferenciando a su vez entre carreteras e in-fraestructuras ferroviarias Mientras que el traacuten-sito de trenes sobre las viacuteas de ferrocarril puede originar chispas que son causa documentada de numerosos incendios en el entorno de las liacuteneas del tren el papel de las carreteras como causa accidental de incendios puede resultar maacutes discu-tible Cabe recordar que el hecho de arrojar coli-llas desde la ventanilla de un vehiacuteculo es un acto punible achacable al comportamiento inciacutevico de

un usuario que ademaacutes se sanciona por la legisla-cioacuten vigente y debe perseguirse antes que limitar el desarrollo de la vegetacioacuten que rodea a las viacuteas donde se den estos comportamientos irrespon-sables Por otro lado algunas instituciones por ejemplo WWFAdena (2006) hace tiempo que ad-vierten sobre la necesidad de revisar la actual cla-sificacioacuten de causas de incendios forestales para reflejar mejor la realidad del problema De hecho Aacutelamo (2007) cita a los incendios forestales como ejemplo evidente donde la prevencioacuten no deberiacutea descuidar las causas y motivaciones de no pocos incendios provocados

Figura 11 En la imagen de la izquierda Monfraguumle (Caacuteceres) el estado de conservacioacuten de algunas sentildeales que no estaacuten directamente relacionadas con la seguridad vial puede denotar cierto desintereacutes sobre los aspectos ambientales (Foto Carlos Iglesias) En la imagen de la derecha rodal de vegetacioacuten arboacuterea aloacutectona (Pinus sp) afectado por un incendio en una margen de la autopista Reacutegis Bittancourt (Brasil) pese a que esta zona es de clima muy huacutemedo y con una vegetacioacuten potencial correspondiente a lsquoMata Atlaacutenticarsquo con muy escasos incendios (Foto Ignacio Mola)

Un caso similar de aplicacioacuten de actuaciones preven-tivas en el entorno de las carreteras es por ejemplo el que se recoge en un anuncio de licitacioacuten puacutebli-ca de la Direccioacuten General de Carreteras del Estado para la redaccioacuten del proyecto de desbroce y tala de aacuterboles en zona de dominio puacuteblico y taludes en toda la red de carreteras del Estado en la provin-cia de Lugo (BOE nordm 104 de 30 de abril de 2008) en cumplimiento de la Ley de prevencioacuten y defensa contra los incendios forestales de Galicia (DOG nordm 74 de 9 de abril de 2007) El artiacuteculo 21 de esta Ley establece la obligatoriedad de gestionar la biomasa vegetal en los terrenos incluidos en la zona de domi-nio puacuteblico de la red de autopistas autoviacuteas y viacuteas raacutepidas y carreteras

En todo caso las citadas comunidades autoacutenomas no son las uacutenicas donde se establecen zonas de influencia forestal de varios centenares de metros ni donde se obliga a los titulares de las infraes-tructuras de transporte a actuar sobre la vegetacioacuten de su entorno Por ejemplo en el caso de Andalu-ciacutea cuya Ley 51999 de prevencioacuten y lucha contra los incendios forestales (BOJA nordm 82 16 de julio de 1999) apenas incluiacutea una breve mencioacuten a las viacuteas de comunicacioacuten ha aprovechado su Reglamento de desarrollo para incorporar la obligacioacuten de mantener libres de residuos matorral y vegetacioacuten herbaacutecea durante las eacutepocas de peligro medio y alto (es decir desde el 1 de mayo hasta el 31 de octubre) tanto la zona de dominio puacuteblico como la de servidumbre de las carreteras viacuteas feacuterreas y otras viacuteas de co-municacioacuten Si bien antildeade que podriacutean mantenerse formaciones arboacutereas y arbustivas en las densidades que en su caso se establezcan

El coste de las anteriores medidas de prevencioacuten queda reflejado en el Plan de Autoproteccioacuten 2008-2010 de ADIF que ha supuesto una inversioacuten de maacutes de 900000 euros en la Comunidad Foral de Navarra en la prevencioacuten de incendios proacuteximos a los 199 km de red convencional en esta comunidad Este Plan incluye labores desbroce del estrato her-baacuteceo en una franja de 8 m a cada lado de la viacutea desbroce del matorral poda hasta 5 m de altura en los ejemplares arboacutereos y eliminacioacuten de los restos procedentes de desbroce y corta ademaacutes de riegos con herbicida sobre la plataforma ferroviaria mediante trenes herbicidas formados por vagones laboratorio de preparados quiacutemicos de almace-namiento de productos herbicidas y de almacena-miento de envases vaciacuteos y residuos (ABC 2010)

Figura 12 Siega parcial del talud de una autoviacutea conservando parte del estrato herbaacuteceo y un ejemplar arboacutereo sin podar (Foto Javier Martiacutenez de Castilla FERROVIAL-AGROMAacuteN)

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IacuteNDICE

Retomando el grado de influencia que las normas de prevencioacuten de incendios forestales pueden tener a la hora de disentildear la restauracioacuten de las infraestructuras de transporte el Decreto 1301998 de la Generalitat de Catalunya preveacute que se incluyan como factores a tener en cuenta en la EIA de las nuevas infraestructu-ras mapas de combustibilidad continuidad de la masa forestal grados de inflamabilidad de la vegetacioacuten y anaacutelisis de los incendios producidos en las zonas que atraviesa la nueva viacutea de comunicacioacuten Por otro lado para la restauracioacuten de taludes se obliga a seleccionar especies de baja inflamabilidad que dificulten el ini-cio y la propagacioacuten del fuego (condicioacuten que no es extrantildeo encontrar en las declaraciones de impacto am-biental de infraestructuras localizadas tambieacuten en otras regiones) Algunos criterios que se establecen por De-creto para la seleccioacuten de especies son los siguientes

a) Evitar las especies que contengan aceites esen-ciales y otros compuestos orgaacutenicos volaacutetiles y altamente inflamables

b) Priorizar las especies que mantienen las hojas verdes y un alto contenido hiacutedrico en los tejidos durante el verano las que presentan una menor relacioacuten superficievolumen (plantas de estructura compacta) y las que generan pocos restos finos

c) Favorecer las especies cuyas hojas y los restos se descomponen con maacutes rapidez

d) Favorecer las especies de madera densa y alta capacidad caloacuterica que necesitan absorber una gran cantidad de calor antes de encenderse

Finalmente en el aacutembito de Cataluntildea cabe destacar la obligacioacuten de la Direccioacuten General del Medio Natural de elaborar un informe anual con relacioacuten a los incendios originados en las zonas de seguridad y de proteccioacuten de las carreteras de forma que se pueda tener un co-nocimiento preciso de los tramos de carretera donde se han producido estos incendios y de sus causas que deberaacute poner en conocimiento de los organismos res-ponsables y de las entidades municipales

5 Sanidad vegetal

Otro aspecto de importancia a la hora de seleccionar especies y durante las posteriores labores de manteni-miento tiene que ver con la materia fitosanitaria pues-to que los planes de lucha y prevencioacuten contra deter-minadas plagas y enfermedades de algunas especies vegetales pueden repercutir sobremanera en las espe-cies implantadas en taludes y otras zonas restauradas

de las infraestructuras de transporte El ejemplo por antonomasia en esta materia lo trae la enfermedad del fuego bacteriano una grave enfermedad de los vege-tales causada por la bacteria Erwinia amylovora La pri-mera referencia legal sobre el fuego bacteriano es el RD 12011999 (BOE nordm 184 de 3 de agosto de 1999) por el que se establece el programa nacional de erra-dicacioacuten y control del fuego bacteriano de las rosaacuteceas (modificado posteriormente por el RD 15122005 y maacutes recientemente por el RD 2462010) Espantildea estaacute con-siderada en el aacutembito territorial de la Unioacuten Europea como lsquozona protegidarsquo frente a la bacteria que causa la enfermedad de manera que no se considera esta-blecida en el territorio nacional Aunque es frecuente la deteccioacuten de focos en distintos aacutembitos de nuestra geografiacutea el RD 2462010 (BOE nordm 73 de 29 de marzo de 2010) ha suprimido el Anexo I del RD 12011999 donde se declaraban la provincia de Guipuacutezcoa y el centro y norte de Navarra como zonas donde la enfer-medad siacute se consideraba establecida Esta enfermedad afecta fundamentalmente a plantas de la familia de las rosaacuteceas ocasionando importantes peacuterdidas econoacutemi-cas por dantildeos directos en explotaciones de frutales de pepita en general y de manzano y peral en particular asiacute como en el sector de plantas ornamentales pertene-cientes a dicha familia El programa y sus medidas son de aplicacioacuten en todo el territorio nacional excepto en las zonas no protegidas que se determinen para las cuales seriacutean de aplicacioacuten las disposiciones estableci-das en su artiacuteculo 9 Ademaacutes conviene resaltar que las medidas adoptadas se declaran de utilidad puacuteblica de acuerdo con la Ley 432002 de sanidad vegetal (BOE nordm 279 de 21 de noviembre de 2002)

Entre las medidas preventivas se preveacute la realizacioacuten de estudios sistemaacuteticos por parte de las comunida-des autoacutenomas Si como consecuencia del resultado de las prospecciones o de la comunicacioacuten a la que quedan obligados particulares y entes puacuteblicos en el artiacuteculo 3 se confirmara la presencia de un foco inicial de fuego bacteriano ademaacutes de tenerse que declarar contaminada la zona de afeccioacuten la comu-nidad autoacutenoma estableceraacute una zona de seguridad alrededor del foco detectado que quedaraacute delimitada en funcioacuten de los conocimientos sobre la epidemiolo-giacutea de la enfermedad y de los meacutetodos de profilaxis especiacuteficos pero que en principio cubriraacute una exten-sioacuten miacutenima de un aacuterea circular de 1 km de radio Entre las medidas a adoptar en esa zona de seguridad se encuentra la prohibicioacuten de plantacioacuten o replanta-cioacuten de vegetales hospedantes a la enfermedad sin la expresa autorizacioacuten de la comunidad autoacutenoma mientras se mantenga vigente la zona de seguridad Entre los requisitos especiales para la introduccioacuten y desplazamiento de vegetales y productos vegetales

hospedantes de Erwinia amylovora en y por una zona protegida contra dicho organismo nocivo es precep-tivo el pasaporte fitosanitario de acompantildeamiento (modalidad zona protegida) tanto para el material originario de la zona protegida como para el intro-ducido desde una zona no protegida La enfermedad del fuego bacteriano genera repetitivos episodios de alarma en aacutembitos reducidos que finalmente se traducen a nivel autonoacutemico en una mayor presioacuten normativa sobre el empleo ornamental de algunas es-pecies vegetales de lo que en un principio se deduce de las medidas preventivas de la Legislacioacuten baacutesica Por todo ello seguacuten las circunstancias no resulta ex-trantildeo encontrar recomendaciones en algunos planes autonoacutemicos para que las consejeriacuteas competentes adopten medidas encaminadas a retirar determinadas especies ornamentales de los maacutergenes de las carre-teras de su titularidad

En este sentido en el aacutembito de La Rioja el De-creto 1052003 (BOR nordm 112 de 9 de septiembre de 2003) prohibiacutea por un periacuteodo de 5 antildeos la plan-tacioacuten de ornamentales hospedantes de los geacuteneros Chaenomeles Crataegus Eriobotrya Malus Mespilus Photinia Pyracantha Pyrus Sorbus y Stranvaesia en aceras medianas y zonas ajardinadas de carreteras autoviacuteas y jardines puacuteblicos de toda la Comunidad Autoacutenoma de La Rioja en el marco de la lucha contra el fuego bacteriano Posteriormente la Orden 112009 de la Consejeriacutea de Agricultura Ganaderiacutea y Desarro-llo Rural (BOR nordm 27 de 27 de febrero de 2009) ha extendido a las viacuteas o jardines puacuteblicos o privados la prohibicioacuten de plantar algunas especies ornamentales en el mencionado marco de la lucha contra el fuego bacteriano dentro del territorio de La Rioja En defi-nitiva el proyectista se encuentra una vez maacutes con restricciones legales para la seleccioacuten de especies y aunque quizaacutes no fueran las maacutes habituales para res-tauraciones en tramos interurbanos no debe omitirse el hecho de que la coincidencia de varias normas en este sentido puede originar situaciones contradicto-rias con las restauraciones propuestas durante la tra-mitacioacuten ambiental de este tipo de proyectos

6 Trasplantes

Una tendencia de especial importancia por su cues-tionable eficacia y el consumo de recursos econoacute-micos que representa cuando no responde a la sin-gularidad de alguacuten ejemplar que lo justifique es el trasplante indiscriminado de aacuterboles con motivo de la construccioacuten de una infraestructura de transporte No son extrantildeas las situaciones en las que debido al exceso de celo en la interpretacioacuten de una DIA el

criterio predominante de una supervisioacuten anoacutenima o sencillamente con motivo del nombre con que se designe una autoviacutea los redactores de proyectos se ven obligados a incluir el trasplante indiscriminado de pies arboacutereos a veces de especies o ejemplares de dudoso intereacutes El trasplante de arbolado cons-tituye una de las labores de arboricultura de mayor cuantiacutea econoacutemica y a fecha de hoy es difiacutecil su in-tegracioacuten en los tiempos reales de la obra civil Pese a ello no son pocas las recomendaciones por medio de instrucciones guiacuteas o incluso normativa oficial en las que se contempla el trasplante de arbolado como medida de aplicacioacuten general a incorporar en proyectos de infraestructuras de transporte

Figura 13 Trasplante de un cedro de grandes dimensiones en un entorno urbano

Aunque son escasos los informes en los que se ofrezcan datos del seguimiento de esta medida en el aacutembito de las infraestructuras de transporte los que logran alguna difusioacuten como Mendiburu y Septieacuten (2007) y Velasco et al (2008) parecen evidenciar que se trata de uno de los maacutes claros ejemplos de afec-cioacuten que deberiacutea motivar una modificacioacuten de traza-do en fase de estudio informativo si es que la exis-tencia de alguacuten aacuterbol o arboleda singular mereciese tal consideracioacuten antes que contemplar trasplantes indiscriminados en fase de proyecto de construccioacuten

La construccioacuten de infraestructuras de transporte implica ocupar parte del territorio atravesado e inevitablemente afecta de forma directa a la ve-getacioacuten que pudiera existir Si las afecciones pre-vistas no fueran asumibles el procedimiento de EIA no deberiacutea resolverse con una DIA positiva a cambio de proponer la realizacioacuten del trasplan-te masivo de los aacuterboles afectados Entre otros

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IacuteNDICE

motivos porque si no hay correspondencia entre el coste de una medida correctora y su probabi-lidad de eacutexito se dantildea directamente a la credibi-lidad del propio procedimiento y de las medidas de restauracioacuten En otras ocasiones se propone su compensacioacuten mediante la plantacioacuten de nuevas unidades de vegetacioacuten que sustituyan a los pies afectados por la obra En todo caso se constata una tendencia creciente que obliga a incorporar en los proyectos este tipo de medidas Probable-mente sean recomendaciones inspiradas en algu-nos casos en la existencia de normas referidas a la proteccioacuten del arbolado urbano como por ejemplo la Ley 82005 de 26 de diciembre de Proteccioacuten y Fomento del Arbolado Urbano de la Comunidad de Madrid (BOCM nordm 312 de 31 de di-ciembre de 2005) Esta Ley prohiacutebe la tala de todos los ejemplares arboacutereos de cualquier especie con maacutes de 10 antildeos de antiguumledad o 20 cm de diaacuteme-tro de tronco al nivel del suelo que se ubiquen en

suelo urbano y se vean afectados por obras de reparacioacuten o reforma de cualquier clase o por la construccioacuten de infraestructuras debieacutendose pro-ceder a su trasplante Aunque si por razones teacutec-nicas dicho trasplante no fuera posible se podriacutea autorizar la tala del ejemplar afectado mediante decreto del alcalde singularizado para cada ejem-plar previo expediente en el que se acredite la inviabilidad de cualquier otra alternativa Ademaacutes en aquellos casos en los que la tala sea la uacutenica alternativa viable se exigiraacute en la forma en que se establezca la plantacioacuten de un ejemplar adulto de la misma especie por cada antildeo de edad del aacuterbol eliminado Es importante tener en cuenta el papel y las caracteriacutesticas de manejo de la vege-tacioacuten arboacuterea en diferentes medios debieacutendose reflexionar sobre la extrapolacioacuten de estas normas o recomendaciones concebidas para las zonas verdes del medio urbano al caso de las infraes-tructuras de transporte en el medio natural

IV CONCLUSIONES

Algunas normas sectoriales como el Reglamen-to General de Carreteras (RD 18121994) con-templan la necesidad de revisar perioacutedicamente para su actualizacioacuten permanente las normas e instrucciones teacutecnicas a las que deban sujetarse los trabajos y obras de construccioacuten de estas in-fraestructuras Este libro en su conjunto podriacutea funcionar como revulsivo para esta renovacioacuten pues se identifican problemas teacutecnicos vaciacuteos y contradicciones legales y se aportan bases cien-tiacuteficas en el aacutembito de la restauracioacuten ecoloacutegica de estas infraestructuras

La confeccioacuten de instrucciones de caraacutecter ambien-tal y de obligado cumplimiento en la fase de re-daccioacuten de proyectos actualizadas perioacutedicamen-te permite incorporar criterios baacutesicos adecuados a la realidad de los proyectos de infraestructuras de transporte En el sector ferroviario por ejem-plo la redaccioacuten de los proyectos de liacuteneas de alta velocidad se rige por las IGP de ADIF (y el equiva-lente manual para la redaccioacuten de proyectos de la DG de Infraestructuras Ferroviarias del Ministerio de Fomento) cuyo Capiacutetulo 6 estaacute reservado al Medio Ambiente

La aplicacioacuten estricta de algunas normas am-bientales crea un escenario muy complejo para el disentildeo de restauraciones viables que requiere ser debatido en profundidad Por ejemplo no se pueden seleccionar especies sin aceites o resinas y con contenidos hiacutedricos elevados durante el ve-rano simplemente por las caracteriacutesticas ecofisio-loacutegicas de la mayor parte de especies presentes en la Peniacutensula Por otro lado los protocolos de prevencioacuten contra incendios arruinan los trabajos de restauracioacuten poco tiempo despueacutes de su rea-lizacioacuten

Una evidencia en liacutenea con el capiacutetulo precedente sobre las implicaciones de las autorizaciones am-bientales en relacioacuten con la redaccioacuten de los pro-yectos es que entre el condicionado de la DIA y el contenido del proyecto existe una desvinculacioacuten del oacutergano ambiental que termina devaluando el objeto o la interpretacioacuten de los condicionados de muchas declaraciones Hay que tener en cuen-ta que la DIA es la verdadera desencadenante de todo lo relacionado con la restauracioacuten de infra-estructuras de transporte que estamos hablando sobre restauracioacuten ecoloacutegica

V BIBLIOGRAFIacuteA

ABC 2010 httpwwwabcesagenciasnoticiaaspnoticia=573662

Aacutelamo C del y A Saacutenchez Gascoacuten 2007 Los Incen-dios Forestales en la Comunidad de Madrid Causas efectos prevencioacuten sancioacutenhellip Fundacioacuten para la In-vestigacioacuten y el Desarrollo Ambiental (FIDA) y Conse-jeriacutea de Medio Ambiente y Ordenacioacuten del Territorio Comunidad de Madrid

BOC 2004 Decreto 612004 de 17 de junio so-bre carreteras de especial proteccioacuten por atravesar Espacios Naturales Protegidos de Cantabria Con-sejo de Gobierno Boletiacuten Oficial de Cantabria nordm 123 del jueves 24 de junio de 2004 6758-6761 httpboccantabriaesbocesverAnuncioActiondoidAnuBlob=67851

BOCM 1991 Ley 31991 de 7 de marzo de carrete-ras de la Comunidad de Madrid Boletiacuten Oficial de la Comunidad de Madrid de 21 de marzo de 1991

BOCM 2005 Ley 82005 de 26 de diciembre de Proteccioacuten y Fomento del Arbolado Urbano de la Comunidad de Madrid Presidencia de la Comuni-dad Boletiacuten Oficial de la Comunidad de Madrid nordm 312 del saacutebado 31 de diciembre de 2005 6-9 httpwwwmadridorgcsSatelliteblobcol=urldataampblobheader=application2Fpdfampblobheadername1=Content-Dispositionampblobheadervalue1=filename3DCM_LEY_8_2005pdfampblobkey=idampblobtable=MungoBlobsampblobwhere=1220580595573ampssbinary=true

BOE 1963 Orden Ministerial de 21 de marzo de 1963 por la que se aprueba la Instruccioacuten de la Direccioacuten General de Carreteras 71 IC sobre lsquoPlan-taciones en las zonas de servidumbre de las carrete-rasrsquo Ministerio de Obras Puacuteblicas Boletiacuten Oficial del Estado nordm 84 del lunes 8 de abril de 1963 5908-5909 httpwwwcetopesassetsNormativaProfesplantacionesO-21-03-63Plantacionespdf

BOE 1986 Real Decreto Legislativo 13021986 de 28 de junio de evaluacioacuten de impacto ambiental Boletiacuten Oficial del Estado nordm 155 del lunes 30 de ju-nio de 1986 23733-23735 httpwwwboeesboedias19860630pdfsA23733-23735pdf

BOE 1988 Real Decreto 11311988 de 30 de sep-tiembre por el que se aprueba el Reglamento para la ejecucioacuten de Real Decreto Legislativo 13021986

de 28 de junio de Evaluacioacuten de Impacto Ambiental Boletiacuten Oficial del Estado nordm 239 del mieacutercoles 5 de octubre de 1988 28911-28916 httpwwwboeesboedias19881005pdfsA28911-28916pdf

BOE 1988 Ley 251988 de 29 de julio de Carrete-ras Jefatura del Estado Boletiacuten Oficial del Estado nordm 182 del saacutebado 30 de julio de 1988 23514-23524 httpwwwboeesboedias19880730pdfsA23514-23524pdf

BOE 1990 Ley 51990 de 24 de mayo de Carreteras de la Comunidad Autoacutenoma de las Islas Baleares BOE nordm 184 del jueves 2 de agosto de 1990 22613-22619 httpwwwboeesboedias19900802pdfsA22613-22619pdf

BOE 1994 Real Decreto 18121994 de 2 de septiem-bre por el que se aprueba el Reglamento General de Carreteras Ministerio de Obras Puacuteblicas Trans-portes y Medio Ambiente Boletiacuten Oficial del Esta-do nordm 228 de 23 de septiembre de 1994 29237-29262 httpwwwboeesboedias19940923pdfsA29237-29262pdf

BOE 1997 la Ley 51996 de 17 de diciembre de Ca-rreteras de Cantabria Comunidad Autoacutenoma de Can-tabria Boletiacuten Oficial del Estado nordm 51 del viernes 28 de febrero de 1997 6778-6787 httpwwwboeesboedias19970228pdfsA06778-06787pdf

BOE 1999 Real Decreto 12011999 de 9 de ju-lio por el que se establece el programa nacional de erradicacioacuten y control del fuego bacteriano de las rosaacuteceas Ministerio de Agricultura Pesca y Alimentacioacuten Boletiacuten Oficial del Estado nordm 183 del martes 3 de agosto de 1999 28784-28788 httpwwwboeesboedias19990803pdfsA28784-28788pdf

BOE 2002 Ley 432002 de 20 de noviembre de sanidad vegetal Jefatura del Estado Boletiacuten Ofi-cial del Estado nordm 279 del jueves 21 de noviem-bre de 2002 40970-40988 httpwwwboeesboedias20021121pdfsA40970-40988pdf

BOE 2003 Real Decreto 2892003 de 7 de mar-zo sobre comercializacioacuten de los materiales fores-tales de reproduccioacuten Ministerio de la Presidencia Boletiacuten Oficial del Estado nordm 58 del saacutebado 8 de marzo de 2003 9262-9299 httpwwwboeesboedias20030308pdfsA09262-09299pdf

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BOE 2003 Ley 332003 del Patrimonio de las Ad-ministraciones Puacuteblicas Boletiacuten Oficial del Estado nordm 264 del martes 4 de noviembre de 2003 38924-38967 httpwwwboeesboedias20031104pdfsA38924-38967pdf

BOE 2003 Ley 432003 de 21 de noviembre de Montes Jefatura del Estado Boletiacuten Oficial del Estado nordm 280 del saacutebado 22 de noviembre de 2003 41422 -41442 httpwwwboeesboedias20031122pdfsA41422-41442pdf

BOE 2004 Real Decreto 23872004 de 30 de di-ciembre por el que se aprueba el Reglamento del Sector Ferroviario Ministerio de Fomento Boletiacuten Oficial del Estado nordm 315 del viernes 31 de diciem-bre de 2004 42719-42763 httpwwwboeesboedias20041231pdfsA42719-42763pdf

BOE 2005 Real Decreto 15122005 de 22 de di-ciembre por el que se modifica el Real Decreto 12011999 de 9 de julio por el que se establece el programa nacional de erradicacioacuten y control del fue-go bacteriano de las rosaacuteceas Ministerio de Agricul-tura Pesca y Alimentacioacuten Boletiacuten Oficial del Estado nordm 312 del viernes 30 de diciembre de 2005 43140 -43141 httpwwwboeesboedias20051230pdfsA43140-43141pdf

BOE 2006 Ley 92006 de 28 de abril sobre evaluacioacuten de los efectos de determinados pla-nes y programas en el medio ambiente Jefatura del Estado Boletiacuten Oficial del Estado nordm 102 del saacutebado 29 de abril de 2006 16820-16830 httpwwwboeesboedias20060429pdfsA16820-16830pdf

BOE 2006 Ley 102006 de 28 de abril por la que se modifica la Ley 432003 de 21 de noviembre de Montes Jefatura del Estado Boletiacuten Oficial del Esta-do nordm 102 del saacutebado 29 de abril de 2006 16830-16839 httpwwwboeesboedias20060429pdfsA16830-16839pdf

BOE 2007 Ley 262007 de 23 de octubre de Responsabilidad Medioambiental Boletiacuten Ofi-cial del Estado nordm 255 del mieacutercoles 24 octu-bre 200743229-43250 httpwwwboeesboedias20071024pdfsA43229-43250pdf

BOE 2007 Ley 422007 del Patrimonio Natural y de la Biodiversidad Jefatura del Estado Boletiacuten Oficial del Estado nordm 299 del viernes 14 diciem-bre 200751275-51327 httpwwwboeesboedias20071214pdfsA51275-51327pdf

BOE 2008 Real Decreto Legislativo 12008 de 11 de enero por el que se aprueba el texto refundido de la Ley de Evaluacioacuten de Impacto Ambiental de pro-yectos Boletiacuten Oficial del Estado nordm 23 del saacutebado 26 enero 2008 4986-5000 httpwwwboeesboedias20080126pdfsA04986-05000pdf

BOE 2008 Real Decreto 20902008 de 22 de di-ciembre por el que se aprueba el Reglamento de desarrollo parcial de la Ley 262007 de 23 de oc-tubre de Responsabilidad Medioambiental Bole-tiacuten Oficial del Estado nordm 308 del martes 23 de di-ciembre de 2008 51626-51646 httpwwwboeesboedias20081223pdfsA51626-51646pdf

BOE 2009 Resolucioacuten de 28 de julio de 2009 de la Direccioacuten General de Recursos Agriacutecolas y Gana-deros por la que se autoriza y publica el Cataacutelo-go Nacional de las Regiones de Procedencia rela-tiva a diversas especies forestales Boletiacuten Oficial del Estado nordm 224 del mieacutercoles 16 de septiembre de 2009 77628-77660 httpwwwboeesboedias20090916pdfsBOE-A-2009-14709pdf

BOE 2010 Real Decreto 2462010 de 5 de marzo por el que se modifica el Real Decreto 12011999 de 9 de julio por el que se establece el programa nacional de erradicacioacuten y control del fuego bacte-riano de las rosaacuteceas Ministerio de Medio Ambiente y Medio Rural y Marino Boletiacuten Oficial dwel Estado nordm 776 del lunes 29 de marzo de 2010 29347-29349 httpwwwboeesboedias20100329pdfsBOE-A-2010-5103pdf

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BOG 2006 Decreto Foral Normativo 12006 por el que se aprueba el texto refundido de la norma foral de carreteras y caminos de Gipuzkoa Diputacioacuten Fo-ral del Gipuzkoa Boletiacuten Oficial de Gipuzkoa nordm 117 de 21 de junio de 2006 14581-14630 httpwwwgipuzkoanetcastellbog20060621bo060621pdf

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BOJA 2001 Ley 82001 de Carreteras de Andaluciacutea Bo-letiacuten Oficial de la Junta de Andaluciacutea nordm 85 del jueves 26 de julio de 2001 12799-12820 httpwwwjunta-deandaluciaesbojaboletines200185dupdfd1pdf

BOR 2003 Decreto 1052003 de 5 de septiembre por el que se prohiacutebe la plantacioacuten de algunas espe-cies ornamentales en el territorio de la Comunidad Autoacutenoma de La Rioja en el marco de la lucha contra el fuego bacteriano (Erwinia Amylovora) Consejeriacutea de Agricultura y Desarrollo Econoacutemico Boletiacuten Ofi-cial de La Rioja nordm 112 del martes 9 de Septiembre de 2003 4391

BOR 2009 Orden 112009 de 20 de febrero de la Consejeriacutea de Agricultura Ganaderiacutea y Desarrollo Ru-ral por la que se prohiacutebe la plantacioacuten de algunas especies ornamentales en el territorio de la Comuni-dad Autoacutenoma de La Rioja en el marco de la lucha contra el fuego bacteriano (Erwinia amylovora) Con-sejeriacutea de Agricultura Ganaderiacutea y Desarrollo Rural Boletiacuten Oficial de La Rioja nordm 27 del viernes 27 de febrero de 2009 2545

BORM 2008 Ley 22008 de 21 de abril de Car-reteras de la Comunidad Autoacutenoma de la Regioacuten de Murcia Boletiacuten Oficial de la Regioacuten de Murcia nordm 111 del mieacutercoles 14 de mayo de 2008 15085-15108 httpwwwcroemeswebcroemwebambientensfca9fbec891192b50c1256bd7004f727c2d2962c036d7d511c12574490036f4e3$FILELey20carreteras20Murciapdf

Castellana Ribas J y MA Aacutengel Riaza Lujaacuten 2010 Integracioacuten y Restauracioacuten Paisajiacutestica en Estaciones de Esquiacute En Iglesias Merchaacuten C et al 2010 Estu-dios de Paisaje Aacutembitos de Estudio y Aplicaciones Praacutecticas ECOPAacuteS (Ed) Madrid 147 pp httpwwwecopasesDescargas2010_libro_ecopaspdf

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DO 1997 Directiva 9711CE del Consejo de 3 de marzo de 1997 por la que se modifica la Directiva 85337CEE relativa a la evaluacioacuten de las repercusio-nes de determinados proyectos puacuteblicos y privados sobre el medio ambiente DO L 73 de 1431997 p 515 httpeur-lexeuropaeuLexUriServLexUriServdouri=CELEX31997L0011ESHTML

DO 2003 Directiva 200335CE del Parlamento Eu-ropeo y del Consejo de 26 de mayo de 2003 por la que se establecen medidas para la participa-cioacuten del puacuteblico en la elaboracioacuten de determina-dos planes y programas relacionados con el medio ambiente y por la que se modifican en lo que se refiere a la participacioacuten del puacuteblico y el acceso a la justicia las Directivas 85337CEE y 9661CE del Consejo - Declaracioacuten de la Comisioacuten DO L 156 de 2562003 p 1725 httpeur-lexeuropaeuLexUriServLexUriServdouri=OJL200315600170024ESPDF

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DOGC 1998 Decret 1301998 de 12 de maig pel qual srsquoestableixen mesures de prevencioacute drsquoincendis fores-tals en les agraverees Departament drsquoAgricultura Ramade-ria i Pesca Diari Oficial de la Generalitat de Catalunya nordm 2656 de 9 de junio de 1998 7026-7028 httpmediambientgencatnetImagesesp103_2460pdf

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MARM 2008 Prescripciones teacutecnicas para el segui-miento y evaluacioacuten de la efectividad de las medidas correctoras del efecto barrera de las infraestructuras de transporte Documentos para la reduccioacuten de la fragmentacioacuten de haacutebitats causada por infraestruc-turas de transportes nuacutemero 2 OA Parques Nacio-nales Ministerio de Medio Ambiente y Medio Rural y Marino 138 pp Madrid httpwwwmmaespor-talseccionesbiodiversidaddesarrollo_rural_paisajefragmentacion_ruralpdfEfecto__barrera_infraestruc-turas__transportepdf

MARM 2010 Prescripciones teacutecnicas para la reduc-cioacuten de la fragmentacioacuten de haacutebitats en las fases de planificacioacuten y trazado Documentos para la reduccioacuten de la fragmentacioacuten de haacutebitats causa-da por infraestructuras de transportes nuacutemero 3 OA Parques Nacionales Ministerio de Medio Am-biente y Medio Rural y Marino 145 pp Madrid httpwwwmmaesportalseccionesbiodiversidad

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MMA 2006 Prescripciones Teacutecnicas para el disentildeo de pasos de fauna y vallados perimetrales Documen-tos para la reduccioacuten de la fragmentacioacuten de haacutebitats causada por infraestructuras de transporte nordm 1 O A Parques Nacionales Ministerio de Medio Ambiente Madrid 108 pphttpwwwmmaesportalseccionesbiodiversidaddesarrollo_rural_paisajefragmentaci-on_ruralpdfprescripciones_pasos_valladospdf

Pascual L y S Saura 2008 Integracioacuten de la conec-tividad ecoloacutegica de los bosques en los instrumen-tos de planificacioacuten forestal a escala comarcal y re-gional propuesta metodoloacutegica y nueva herramienta de decisioacuten Montes Revista de Aacutembito Forestal 94 31-37 httpwwwrevistamontesnetdescargalibreaspxid=13315

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Pausas JG y M Verduacute 2008 Fire reduces morpho-space occupation in plant communities Ecology 89 2181-2186

Velasco Ortega JA JJ Rosado Loacutepez y M Arroyo Gutieacuterrez 2008 Estudio de condicionantes en la eje-cucioacuten de trasplantes de arbolado adulto en obra Congreso Nacional del Medio Ambiente Cumbre del Desarrollo Sostenible Madrid 1 al 5 de diciembre de 2008 16 pp httpwwwconama9orgconama9downloadfilesCTs2762_JVelascopdf

Verduacute M y JG Pausas 2007 Fire drives phyloge-netic clustering in Mediterranean Basin woody plant communities Journal of Ecology 95 1316-323

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11Restauracioacuten ecoloacutegica e infraestructuras de transporte perspectivas y recomendaciones

Luis Balaguer Fernando Valladares Adriaacuten Escudero Ignacio Mola y Valentiacuten Alfaya

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CAPIacuteTULO 11 Restauracioacuten ecoloacutegica e infraestructuras de transporte perspectivas y recomendaciones

Luis Balaguer Fernando Valladares Adriaacuten Escudero Ignacio Mola y Valentiacuten Alfaya

En el futuro la integracioacuten ambiental de las ca-rreteras y viacuteas feacuterreas seraacute parte del disentildeo de la infraestructura desde el inicio de la redaccioacuten del proyecto constructivo El disentildeo de la infraestructu-ra contemplaraacute los condicionantes ambientales del territorio que atraviesa El trazado de la viacutea se esta-bleceraacute en funcioacuten de la huella energeacutetica y de las emisiones del traacutefico rodado No seraacuten necesarias las medidas correctoras dado que la configuracioacuten final de la viacutea estaraacute integrada en los procesos eco-loacutegicos locales No se hablaraacute de impactos sino de reconfiguracioacuten del entorno Los taludes no seraacuten planos inclinados sino que el plano de la rasante estaraacute circundado por relieves semejantes a los pre-dominantes en el paisaje regional El efecto barrera de la viacutea seraacute utilizado para bloquear flujos no de-seados tanto hiacutedricos o de sedimentos como de organismos Las viacuteas no solo canalizaraacuten el movi-miento de pasajeros y mercanciacuteas sino que tambieacuten habilitaraacuten corredores ecoloacutegicos para la migracioacuten de polinizadores especies vulnerables o para la co-nexioacuten de poblaciones de organismos La carretera y la viacutea del tren seraacuten elementos de intereacutes tambieacuten para la construccioacuten del paisaje desde una pers-pectiva ecoloacutegica La propia construccioacuten de la viacutea seguiraacute un procedimiento diferente Actualmente se redactan proyectos cerrados que son replanteados a partir de la realidad en obra y corregidos mediante los frecuentes modificados En el futuro el proceso constructivo responderaacute a una estrategia adaptati-va en la que el responsable en obra adecuaraacute las propuestas en funcioacuten de la realidad que encuentra a medida que avanza la construccioacuten

Estos avances sucederaacuten y de alguna forma ya es-taacuten sucediendo impulsados por dos factores El pri-mero y el maacutes eficaz de los motores de cambio seraacute una nueva sensibilidad de los agentes sociales Se generaraacute una demanda que vincularaacute la exigencia ambiental con la calidad de vida de los ciudadanos El concepto mismo de calidad de vida evolucionaraacute y si por ejemplo ahora se identifica con calidad de vida la velocidad seguridad y el confort en el traacutensi-to por la viacutea en el futuro estas exigencias pareceraacuten evidentes y triviales y se ambicionaraacute circular a tra-veacutes de un paisaje funcional con valores educativos y patrimoniales El segundo motor seraacute el avance en el conocimiento cientiacutefico-teacutecnico El salto cua-litativo vendraacute de la mano de la incorporacioacuten de la visioacuten desde la ecologiacutea frente a planteamientos anteriores de inspiracioacuten marcadamente agronoacutemi-ca u ornamental con poco contexto bioloacutegico Por ejemplo frente a siembras y plantaciones prescri-tas por recetas de aplicacioacuten universal se optaraacute por soluciones locales que interpreten el relieve del espacio afectado y contemplen los movimientos de los organismos en el entorno de la infraestructura Se emplearaacute maquinaria adaptada a las nuevas exi-gencias capaces de construir superficies rugosas y estables frente a acabados lisos artificiales

Las limitaciones econoacutemicas no supondraacuten un obs-taacuteculo en la medida que se cambiaraacute el modo de realizar el balance En la actualidad los costes de construccioacuten pesan de forma diferencial En el futu-ro las administraciones y empresas concesionarias contemplaraacuten tambieacuten los costes reales y a largo plazo asociados con el mantenimiento de la infra-estructura como es el caso no ya de las siegas de los herbazales en las maacutergenes de la viacutea sino de las penalizaciones por cierre temporal de la infraestruc-tura por problemas teacutecnicos Incluso el cambio en la sensibilidad permitiraacute incorporar costes intangibles relevantes a escalas temporales mayores

Algunos de estos avances comienzan a vislumbrarse La trasposicioacuten de algunas directivas europeas a la normativa estatal invita a perfeccionar la integracioacuten de la infraestructura en su entorno en lugar de per-seguir la depuracioacuten de las medidas correctoras

En la actualidad el proyecto y el proceso cons-tructivo supeditan las cuestiones ambientales a las exigencias teacutecnicas y econoacutemicas Este plan-teamiento resulta en impactos hidroloacutegicos en las comunidades vegetales en la fauna en el paisaje etc que deben ser paliados mediante medidas co-rrectoras que elevan el coste de la obra Hoy por hoy mientras se opera el cambio de paradigma

las medidas preventivas y correctoras e incluso en ocasiones las compensatorias son evidentemen-te necesarias Su disentildeo y ejecucioacuten no obstante pueden revisarse desde una nueva perspectiva con el fin de mejorar su eficacia en teacuterminos de con-secucioacuten de objetivos y eficiencia en cuanto a la relacioacuten costesbeneficios Las actuales medidas tienen un gran margen de incertidumbre contrario a la concrecioacuten que persiguen los proyectos cons-tructivos y la inversioacuten econoacutemica asociada Es en este contexto donde el presente libro pretende ha-cer su aportacioacuten

La mayor parte del conocimiento actual sobre el comportamiento ecoloacutegico de los espacios afectados por obras civiles se ha obtenido en poco maacutes de una deacutecada Entre las conclusiones relevantes alcanza-das desde esta perspectiva destacan

bull El perfil plano de los taludes es inestable

bull Los desmontes y terraplenes representan dos extremos en un gradiente de estreacutes-pro-ductividad

bull El reclutamiento de plantas en desmontes se produce en pequentildeas depresiones y oquedades

bull El contenido en nitroacutegeno de la tierra vegetal extendida en terraplenes explica el desarrollo de la cobertura vegetal en los primeros antildeos

bull Las comunidades vegetales densas de terra-plenes acogen un menor nuacutemero de espe-cies vegetales que las formaciones abiertas de los desmontes mostrando que cobertura y diversidad no van con frecuencia de la mano y por tanto hay que priorizar o lo uno o lo otro

bull Las hidrosiembras fracasan en desmontes y no son necesarias en condiciones favorables

bull La introduccioacuten de especies o ecotipos exoacuteti-cos en las mezclas de hidrosiembra comprome-te el establecimiento de las especies nativas

bull La llegada espontaacutenea de semillas es un or-den de magnitud mayor que el aporte de una hidrosiembra convencional

bull La gran mayoriacutea de las semillas que alcanzan un talud proceden de fragmentos proacuteximos de vegetacioacuten ruderal y arvense

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IacuteNDICE

bull La mayor parte de las especies vegetales que habitan en los taludes han sido dispersadas por el viento o la gravedad con escaso con-curso de animales dispersores

bull Las infraestructuras lineales generan una frag-mentacioacuten de las poblaciones de fauna que puede atenuarse mediante soluciones teacutecni-cas que aumenten la permeabilidad de la viacutea

Tanto la aplicacioacuten de las medidas correctoras como la investigacioacuten desde una perspectiva ecoloacutegica si-guen en gran medida enfocadas en el disentildeo de so-luciones a escala de talud En cuanto a las primeras se evaluacutean y facturan las hidrosiembras por metros cuadrados y se alternan los moacutedulos de plantacioacuten a lo largo del talud y las medianas En cuanto a la investigacioacuten se analizan las limitaciones para el asentamiento de la cubierta vegetal en parcelas cir-cunscritas a los taludes Asiacute se ha venido trabajando en los gradientes de disponibilidad de nutrientes o agua en el talud y en la respuestatolerancia de los vegetales frente a las condiciones locales Habitual-mente solo han escalado hasta el nivel de paisaje los estudios sobre movimientos de fauna y los toda-viacutea incipientes estudios sobre dispersioacuten de semillas y polinizacioacuten En el futuro las soluciones teacutecnicas avaladas por las conclusiones alcanzadas en los tra-bajos de investigacioacuten se orientaraacuten sin embargo hacia la escala del paisaje Asiacute el intereacutes de que esteacuten presentes determinadas especies no radicaraacute en que aportan mayor o menor cobertura sino en su significado a escala de paisaje quizaacutes como recurso para otros organismos de intereacutes que habiten en los maacutergenes de la viacutea quizaacutes como conector de pobla-ciones desvinculadas por la distancia quizaacutes como atractor de especies animales que aportan semillas o propaacutegulos de los que no se venden en los viveros comerciales o simplemente por constituir el mismo talud un refugio para especies que se han extinguido a escala de paisaje y regional

La necesidad de que las soluciones teacutecnicas se di-sentildeen a escala de paisaje vendraacute impuesta por los nuevos objetivos que se les exigiraacuten a los trabajos de integracioacuten ambiental Estos objetivos no seraacuten otros que la provisioacuten de ciertos servicios ecosisteacute-micos a un amplio espectro de potenciales benefi-ciarios de la existencia y funcionamiento de la viacutea El Millenium Ecosystem Assessment (2005) agrupa estos servicios en cuatro bloques de regulacioacuten de soporte de provisioacuten y culturales Pongamos al-gunos ejemplos de los servicios ecosisteacutemicos que podriacutea ofrecer una exitosa restauracioacuten ecoloacutegica de los espacios afectados por una carretera o viacutea feacuterrea

En relacioacuten con los servicios de regulacioacuten iquestpode-mos disentildear la integracioacuten ambiental de los taludes y otras zonas afectadas o generadas por la obra para que favorezcan la infiltracioacuten del agua de lluvia y la recarga de los acuiacuteferos Una eficaz infiltracioacuten reduciriacutea la erosioacuten en manto y la arroyada Pero en este contexto de la regulacioacuten la viacutea podriacutea utili-zarse como elemento de ordenacioacuten hidroloacutegica del territorio aumentando la extensioacuten de una cuenca vertiente o incluso canalizando la escorrentiacutea des-de una cuenca hacia otra

En relacioacuten con los servicios de soporte la restau-racioacuten de determinadas comunidades vegetales en los taludes podriacutea estar orientada por ejemplo a favorecer la propagacioacuten de polinizadores Estos po-linizadores podriacutean alcanzar asiacute en mayor nuacutemero los campos de cultivo y aumentar el rendimiento de las cosechas Las maacutergenes de las viacuteas podriacutean reproducir haacutebitats que funcionaran como refugio para especies de intereacutes como recurso geneacutetico O podriacutean habilitar los flujos de especies causados por un cambio climaacutetico o por la peacuterdida de su haacutebitat en origen Podriacutean ser corredores ecoloacutegicos con funciones ecoloacutegicas que permitieran movimientos de organismos alliacute donde estaacuten interrumpidos por la transformacioacuten del territorio (agricultura urbani-zacioacuten etc)

En relacioacuten con los servicios de provisioacuten la extensa superficie total que representa la suma de los es-pacios ocupados por taludes de carretera y de viacuteas feacuterreas es en siacute misma un recurso En la actuali-dad ese espacio es productivo pero la produccioacuten representa un coste en lugar de un beneficio En concreto el elevadiacutesimo coste de las siegas Coste elevado en ambientes mediterraacuteneos que alcanza niveles increiacutebles bajo climas maacutes favorables para el desarrollo de los vegetales iquestPodriacutea producirse en las maacutergenes de las viacuteas alguacuten bien que representara no solo un ingreso para los gestores de la infraestructu-ra sino un auteacutentico recurso para la poblacioacuten local Hoy en diacutea solo se cultivan los taludes en paiacuteses en desarrollo pero algunos paiacuteses avanzados como Holanda permiten el pastoreo de ovejas en los ta-ludes con lo que evitan las siegas Las opciones son muchas iquestPodriacuteamos generar biocombustibles o pacas de paja uacutetiles para la construccioacuten de determi-nados tipos de edificaciones

En relacioacuten con los servicios culturales el corte de la superficie terrestre que con frecuencia conlleva la construccioacuten de la viacutea pone al descubierto evi-dencias de extraordinario valor educativo y cientiacute-fico Son bien conocidos los enclaves en los que

la excavacioacuten de los desmontes dejoacute al descubierto una conspicua falla como la de El Molar (Madrid) o un singular pliegue como el lsquopliegue Zaleskirsquo tam-bieacuten en El Molar La construccioacuten de la viacutea no solo descubre peculiaridades geoloacutegicas sino tambieacuten restos arqueoloacutegicos y paleontoloacutegicos Fue la exca-vacioacuten para la construccioacuten de un tren la que des-tapoacute entre Atapuerca e Ibeas de los Juarros (Burgos) el yacimiento maacutes importante de la historia de la humanidad en Europa Pero ademaacutes y con indepen-dencia de las sorpresas que encierre la superficie de la tierra la restauracioacuten ecoloacutegica de los taludes de infraestructuras lineales podriacutea llegar a ambicio-nar la recuperacioacuten de paisajes En la actualidad nuestra silueta de humanos se recorta con frecuen-cia cotidiana sobre la superficie de taludes yermos o revestidos con cubiertas verdes anodinas El paisaje que podriacutea recrearse serviriacutea como recurso educa-tivo eso que ves se parece a una dehesa o a un hayedo o son espartales o sabinares o cardonales con tabaibas Nuestro devenir se enmarcariacutea en la singularidad de nuestro paisaje lo cual se opone a la extravagancia del gunitado a la vulgaridad cos-mopolita del asfalto del horizonte enladrillado o de los espacios perifeacutericos degradados La creacioacuten de estos espacios marginales genera usos marginales la construccioacuten de paisajes de calidad genera usos de calidad La recreacioacuten de paisajes en el entorno de la viacutea podriacutea cobrar un valor patrimonial es decir de herencia de nuestros ascendientes y por tanto tener un significado de identidad es decir de reco-nocimiento de los rasgos propios de cada colectivi-dad en interaccioacuten secular con su territorio Circular por una carretera permitiriacutea a los usuarios hacer tu-rismo no como lo hacen las mercanciacuteas sino perci-biendo el mosaico ecoloacutegico y cultural de la comarca que atraviesan

lsquoTout ce qursquoune personne peut imaginer un jour quelqursquoun le reacutealiserarsquo (Todo lo que una persona puede imaginar un diacutea alguien lo realizaraacute) como dijo el visionario Julio Verne La cuestioacuten es quieacuten o quieacutenes seraacuten los que lo realicen los artiacutefices del cambio de paradigma iquestA quieacuten corresponde ser pro-activo iquestQuizaacutes a las administraciones como respon-sables de una gestioacuten ambientalmente sostenible iquestA las administraciones como cadena de transmisioacuten del cambio en el nivel de exigencia de la sociedad iquestO seraacuten las empresas movidas por la buacutesqueda de nuevos mercados y de valores antildeadidos que les per-mitan competir con ventaja frente a otras anquilosa-das en los planteamientos convencionales

iquestExiste actualmente alguna ingenieriacutea o consul-tora capaz de redactar proyectos integrados en el

entorno y que ofrezcan servicios ecosisteacutemicos a la poblacioacuten En un futuro proacuteximo ingenieriacuteas cons-tructoras y concesionarias basaraacuten la calidad dife-rencial de su oferta en criterios ambientales Cons-truir carreteras y viacuteas feacuterreas cada vez se hace mejor se hace maacutes barato y cada vez lo hace maacutes gente Lo que todaviacutea no se hace es utilizar bases ecoloacute-gicas para integrar funcionalmente la infraestructura en el territorio que atraviesa Actualmente muchos interpretan este discurso como el de la dialeacutectica entre hacerlo maacutes barato o hacerlo ambientalmente maacutes ambicioso En el futuro descubriremos que lo ambientalmente maacutes ambicioso es a la larga lo maacutes barato Descubriremos como dice Paul Royal que lo estable es bueno y es bonito y que lo bonito y bueno es estable En el pasado se paseaba y en la actualidad solo se pasa Quizaacutes seamos en el futuro capaces de recuperar nuestro intereacutes por el propio camino

Con la intencioacuten de alentar el avance hacia otra for-ma de hacer las cosas este libro propone las si-guientes recomendaciones

Recomendacioacuten 1

La caracterizacioacuten del medio fiacutesico (litologiacutea cli-ma relieve suelo flora y vegetacioacuten fauna pai-saje medio social y cultural) debe ir orientada al diagnoacutestico de los factores que condicionan cada una de las soluciones teacutecnicas en cada uno de los enclaves singulares generados durante el proceso de construccioacuten de la infraestructura Por ejemplo el estudio del sustrato del clima y de la matriz deben permitir la toma de decisiones sobre si se hace una hidrosiembra y sobre cuaacuteles seriacutean las especies maacutes adecuadas a utilizar No tiene sentido el afaacuten enciclopeacutedico de reunir la maacutexi-ma cantidad de informacioacuten en el menor tiempo posible sobre todo si luego falta tiempo para su anaacutelisis criacutetico

Recomendacioacuten 2

El anaacutelisis de la termopluviometriacutea previo a cual-quier proyecto de restauracioacuten deberiacutea incluir va-riables hasta ahora no habituales en este tipo de estudios tales como el lsquoiacutendice de torrencialidadrsquo o el lsquopunto de marchitezrsquo del suelo Tales variables pueden llegar a ser maacutes limitantes para el eacutexito de la hidrosiembra que la precipitacioacuten media anual u otras habitualmente empleadas

En climas mediterraacuteneos la planificacioacuten de la obra deberiacutea facilitar la ejecucioacuten de hidrosiembras en

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el otontildeo como eacutepoca preferente en lugar de en primavera particularmente en zonas de inviernos suaves

Recomendacioacuten 3

Nunca deben proponerse soluciones generales su-puestamente vaacutelidas para el conjunto de los talu-des de la obra Desmontes y terraplenes son dos universos distintos como lo son los espacios que estuvieron ocupados por parques de maquinaria las superficies bajo pasos elevados o las medianas Cada uno de ellos requiere una solucioacuten teacutecnica in-dividualizada

Recomendacioacuten 4

Las hidrosiembras y plantaciones no son siempre necesarias Es preciso evaluar los costesbeneficios de la aplicacioacuten de estas teacutecnicas y evitarlas alliacute donde la calidad de la tierra vegetal y el grado de conservacioacuten del entorno son favorables asiacute como en aquellos enclaves o periodos del antildeo en los que las condiciones son tan desfavorables que la incer-tidumbre es muy elevada en comparacioacuten con el es-fuerzo e inversioacuten que conllevan

Recomendacioacuten 5

Debe prestarse especial atencioacuten a la combinacioacuten en el coacutectel de hidrosiembra de semillas pioneras (lsquostartersrsquo) junto con autoacutectonas de crecimiento len-to Las primeras pueden inhibir el crecimiento de las segundas cancelando los beneficios que se preten-diacutean alcanzar encareciendo notablemente el precio de la mezcla de semillas

Una adecuada diversidad en la mezcla favoreceraacute el proceso de sucesioacuten y facilitaraacute la estabilidad del sistema en el medio y largo plazo

Recomendacioacuten 6

El grado de integracioacuten ambiental no se mide al peso No se estaacuten haciendo mejor las cosas por in-crementar en el proyecto la potencia del extendido de tierra vegetal ni por incluir un mayor porcentaje de especies autoacutectonas en el coacutectel de hidrosiembra ni por exigir un porcentaje maacutes alto de cobertura vegetal El grado de integracioacuten ambiental debe ser evaluado por profesionales capaces de medir la co-nexioacuten con el entorno los flujos que interrumpe y que canaliza la infraestructura los servicios ambien-tales que ofrece y las consecuencias ambientales in situ y ex situ

Recomendacioacuten 7

Deben sopesarse cuidadosamente las actuaciones de dudosa eficacia tales como la instalacioacuten de ma-llas metaacutelicas redes tridimensionales de materiales plaacutesticos o redes de yute en desmontes de pendien-te mayor a 32 No ha podido demostrarse que estas medidas favorezcan el rendimiento de la hidrosiem-bra en taludes ubicados en climas mediterraacuteneos ni tan siquiera que reduzcan el efecto de la erosioacuten en el medio y largo plazo (en particular aquellas estruc-turas biodegradables)

Recomendacioacuten 8

Los elementos del sistema original que han sido el resultado de un proceso histoacuterico irrepetible ndasho que requeririacutea deacutecadas o siglosndash deben ser conservados en obra como bienes capaces de garantizar el eacutexito de las medidas correctoras En la construccioacuten de infraestructuras lineales estos elementos histoacuteri-cos son dos En primer lugar la tierra vegetal tanto por su fertilidad (contenido en nitroacutegeno disponible para los vegetales) como por su banco de semi-llas y formas de resistencia si se adecua su manejo en obra para conservar dicho banco Y en segundo lugar los fragmentos de vegetacioacuten conservada en las inmediaciones (cabeceras de desmontes pies de terraplenes) como fuente de diaacutesporas que alcan-zaraacuten de forma espontaacutenea y gratuita los taludes y medianas

Recomendacioacuten 9

La adecuada gestioacuten y posterior extendido de la tierra vegetal es siempre la medida correctora maacutes eficiente para la revegetacioacuten de los taludes con es-pecies herbaacuteceas de cuantas pueden acometerse en obra Es importante que el origen de la tierra sea local aunque su calidad agronoacutemica no sea suficien-te debido a que de esta manera se aporta el banco de semillas propio de las condiciones ecoloacutegicas del entorno En este sentido la tierra vegetal deberiacutea extraerse solo a partir de la capa maacutes superficial del terreno tras desbrozar (solo los primeros 5-10 cm en la mayor parte de los suelos estudiados en lugar de los 20-25 que se recomiendan actualmente en los proyectos)

Recomendacioacuten 10

Las actuales praacutecticas de gestioacuten de los acopios de tierra vegetal especialmente los abonados siembras y riegos no tienen efectos positivos En realidad contribuyen a diluir el banco y a reducir el nuacutemero

de semillas viables al inducir su germinacioacuten antes de que se realice el extendido

Recomendacioacuten 11

Debe cuidarse el espesor del extendido de tierra vegetal Extendidos de maacutes de 10 cm de potencia pueden generar problemas de inestabilidad y de enterramiento a excesiva profundidad de las semi-llas viables Circunstancias ambas que reducen la eficacia de la tierra vegetal a la hora de alcanzar los objetivos de revegetacioacuten de los taludes

Recomendacioacuten 12

Las especies lentildeosas pueden ser una buena alterna-tiva a las herbaacuteceas para revegetar taludes en am-bientes con elevado estreacutes hiacutedrico y suelos pobres Para ello las preparaciones someras del suelo de-ben ser descartadas y es fundamental emplear plan-ta de buena calidad morfoloacutegica y fisioloacutegica que haya sido cultivada a partir de semillas obtenidas de la zona de trabajo o de zonas ambientalmente si-milares Debe desterrarse la costumbre de supeditar los trabajos de revegetacioacuten a la inauguracioacuten de la obra llenando el espacio de lsquoverdersquo con la planta-cioacuten de plantas grandes y vistosas cultivadas en ma-ceta que deforman las raiacuteces No se estaacute haciendo un jardiacuten sino integrando ecoloacutegicamente la infra-estructura en el territorio La plantacioacuten de especies lentildeosas no finaliza con la plantacioacuten sino que el desarrollo adecuado de las plantas se garantiza con una serie de cuidados especiacuteficos

Recomendacioacuten 13

Las medidas correctoras en relacioacuten con la fauna deben disentildearse a escala de paisaje conectan-do flujos reales y deben estar fundadas en las

recomendaciones sobre la eficacia de los distintos pasos de fauna

Recomendacioacuten 14

La cicloacutepea inversioacuten de recursos humanos teacutecnicos y econoacutemicos realizada en la construccioacuten de la red de viacuteas feacuterreas y para el traacutefico rodado debe aprovechar-se para generar nuevo conocimiento sobre coacutemo inter-venir eficazmente en el medio sobre los nuevos esce-narios que los humanos estamos generando y sobre nosotros mismos y nuestra actividad en el medio

Recomendacioacuten 15

Es fundamental que el conocimiento sobre la dinaacute-mica de los espacios afectados por infraestructuras lineales y el eacutexito de los tratamientos y medidas preventivas correctoras y compensatorias no se ge-nere exclusivamente mediante el meacutetodo de mejora continua basado en la mecaacutenica del ensayo error Es esencial que estos procedimientos se complementen con otros mucho maacutes eficaces conocidos como de gestioacuten adaptativa en los que el meacutetodo contras-ta hipoacutetesis concretas utilizando parcelas control y disentildeos experimentales propios de la investigacioacuten cientiacutefica

Recomendacioacuten 16

Es necesario promover escenarios efectivamente interdisciplinares donde los diversos condicio-nantes de caraacutecter teacutecnico normativo etc sean conocidos por todos los actores participantes en las distintas fases del ciclo de vida de una infra-estructura con el objeto de diagnosticar y corregir ineficacias y contradicciones en las fases de redac-cioacuten de proyectos construccioacuten y explotacioacuten de las infraestructuras

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1Fuentes recomendadas de informacioacuten adicional

Anexo

IacuteNDICE

313

IacuteNDICE

ANEXO 1 Fuentes recomendadas de informacioacuten adicional

BIBLIOGRAFIacuteA BAacuteSICA

Espantildea

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Garciacutea-Fayos P (coord) 2001 Bases ecoloacutegicas para la recoleccioacuten almacenamiento y germinacioacuten de se-millas de especies de uso forestal de la Comunidad Valenciana Banc de Llavors Forestals (Conselleria de Medi Ambient Generalitat Valenciana) Alboraya (Va-lencia) 82 pp

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Jorba M y VR Vallejo 2010 Manual para la res-tauracioacuten de canteras de roca calcaacuterea en clima me-diterraacuteneo Generalitat de Cataluntildea Contiene infor-macioacuten importante y fichas con recomendaciones so-bre queacute hacer en diferentes situaciones (pendientes altas-bajas tipos de suelo climas distintos)

Ministerio de Medio Ambiente 2006 Prescripciones teacutecnicas para el disentildeo de pasos de fauna y vallados perimetrales Documentos para la reduccioacuten de la fragmentacioacuten de haacutebitats causada por infraestruc-turas de transporte nuacutemero 1 OA Parques Nacio-nales Ministerio de Medio Ambiente 108 pp Madrid

Ministerio de Medio Ambiente 2008 Prescripciones teacutecnicas para el seguimiento y evaluacioacuten de las medidas correctoras destinadas a reducir el impacto de las infraestructuras lineales sobre la fauna Docu-mento 2 de la Serie de Documentos para la Reduc-cioacuten de la Fragmentacioacuten de Haacutebitats causada por Infraestructuras de Transporte publicada por el OA Parques Nacionales del Ministerio de Medio Ambien-te 115 pp Madrid

Ministerio de Medio Ambiente y Medio Rural y Mari-no 2010 Prescripciones teacutecnicas para la reduccioacuten de la fragmentacioacuten de haacutebitats en la fase de plani-ficacioacuten y trazado Documentos 3 de la Serie de Do-cumentos para la Reduccioacuten de la Fragmentacioacuten de Haacutebitats causada por Infraestructuras de Transporte publicada por el OA Parques Nacionales del Minis-terio de Medio Ambiente y Medio Rural y Marino 145 pp Madrid

Navarro Cerrillo RM y Gaacutelvez Ramiacuterez C 2001 Ma-nual para la identificacioacuten y reproduccioacuten de semi-llas de especies vegetales autoacutectonas de Andaluciacutea Consejeriacutea de Medio Ambiente Sevilla 390 pp

Oliet Palaacute J Navarro Cerrillo RM y Contreras Ata-laya O 2003 Evaluacioacuten de la aplicacioacuten de tubos y mejoradores en repoblaciones forestales Consejeriacutea de Medio Ambiente Junta de Andaluciacutea Sevilla 234 pp Una obra muy completa sobre el efecto de distin-tos tipos de tubos protectores en diversas especies mediterraacuteneas

Prada MA y A Arizpe 2008 (coord) Manual de propagacioacuten de aacuterboles y arbustos de ribera Una ayuda para la restauracioacuten de riberas en la regioacuten mediterraacutenea Generalitat Valenciana Valencia ISBN 978-84-482-4964-9

Ramos-Otero del Peral L 1997 Teacutecnicas de re-vegetacioacuten El capiacutetulo de las plantaciones en la

contratacioacuten de las infraestructuras viarias ministe-rio de Fomento

Rey-Benayas JM 2007 Restauracioacuten de ecosiste-mas mediterraacuteneos Coleccioacuten Aula Abierta nordm 20 Universidad de Alcalaacute Contiene un capiacutetulo sobre restauracioacuten de taludes escrito por Carmen Mataix donde se detallan numerosas teacutecnicas de ecotecnolo-giacutea de intereacutes Tambieacuten tiene un capitulo sobre la im-portancia de la calidad de la planta en los proyectos de revegetacioacuten

Rosell C y JM Velasco 1999 Manual de prevencioacute i correcioacute dels impactes de les infraestructures viaacute-ries sobre la fauna Generalitat de Catalunya Depar-tamet de Medi Ambient Catalunya

Velasco JM M Yanes y F Suaacuterez 1995 El Efecto Barrera en Vertebrados Medidas Correctoras en las viacuteas de comunicacioacuten CEDEX Madrid

Aacutembito internacional

Coppin NJ y IG Richards (Eds) 1990 Use of Ve-getation in Civil Engineering Construction Industry Research and Information Association (CIRIA) But-terworths London

Forman R D Sperling JA Bissonette AP Cleven-ger CD Cutshall VH Dale L Fahrig R France CR Goldman K Heanue JA Jones FJ Swanson T Turrentine y TC Winter 2003 Road Ecology Science and Solutions Island Press Washington DC 479 pp

Gray DH y RB Situr 1996 Biotechnical and Soil Boengineering slope stabilization A practical gui-de for erosion control ndash JWiley and Sons New York

Iuell B HGJ Bekker R Cuperus J Dufek G Fry C Hicks V Hlavaacutec V Keacuteller C Rosell T Sangwine N Torslow y B Wandall 2005 Fauna y Traacutefico Manual europeo para identificar conflictos y disentildear solucio-nes COST 341 Fragmentacioacuten del haacutebitat causada por las infraestructuras de transporte Ministerio de Medio Ambiente 166 pp Madrid

Kangas PC 2004 Ecological Engineering Principles and Practice Lewis Puslishers CRC Press Boca Ra-ton Florida

Landis T (Ed) The Container Tree Nursery Manual Forest Service USDA Handbook 674

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Lewis EA 1999 Soil Bioengineering An alternative for Roadside Management A Practical Guide United States Forest Service San Dimas Technology and Development Center San Dimas California Informa-cioacuten detallada y fichas sobre distintas teacutecnicas eco-tecnoloacutegicas

Oliveira G 2008 Plantaciones Curso Teacutecnico de Restauracioacuten Ecoloacutegica de Canteras Outatildeo (Setuacute-bal) Portugal 24 ndash 27 09 2008

Piotto B y A di Noi 2003 Seed propagation of mediterranean trees and shrubs APAT - Agency for the protection of the environment and for technical services Roma 108 p

Society for Ecological Restoration International 2004 The SER International Primer on Ecological Restoration Society for Ecological Restoration Inter-national Science amp Policy Working Group (Version 2 October 2004)

Steinfeld DE 2007 Roadside revegetation An inte-grated approach to establishing native plants Fede-ral Highway Administration Western Federal Lands Highway Division Vancouver Canadaacute

SITIOS INTERESANTES EN INTERNET

Acceso a la metodologiacutea para realizar el Landsca-pe Function Analysis (LFA) y comprobar el estado funcional en el que se encuentran los taludes (ver capiacutetulo de vigilancia ambiental) httpwwwcsiroauservicesEcosystemFunctionAnalysishtml

Ministerio de Medio Ambiente y Medio Rural y Marino Seccioacuten Biodiversidad Conectividad ecoloacutegica en el territorio Fragmentacioacuten Esta paacutegina web da acceso a todos los documentos elaborados por la Comisioacuten Teacutecnica del Grupo de Trabajo de Fragmentacioacuten de

Haacutebitats causada por Infraestructuras de Transporte httpwwwmmaesportalseccionesbiodiversidadde-sarrollo_rural_paisajefragmentacion_ruralindexhtm

Infra Eco Network Europe Red europea constituida por diferentes organizaciones institutos y expertos unidos por un intereacutes comuacuten que es el fenoacutemeno de la fragmentacioacuten de haacutebitats causado por la cons-truccioacuten de infraestructuras lineales de transporte httpwwwcbmsluseiene

International Conference on Ecology and Transporta-tion (ICOET) Interesante paacutegina web para estar al diacutea de los uacuteltimos avances en temas relacionados con los distintos impactos generados por las infraestructuras de transporte Permite el acceso a todos los trabajos presentados en esta conferencia que se celebra cada dos antildeos httpwwwicoetnetindexasp

Road Ecology Center de la Universidad de Davis California (EEUU) Portal de acceso de este centro especializado Ofrece informacioacuten muy variada no solo de sus investigaciones tambieacuten de congresos y seminarios interesantes relacionados con estos temas y ademaacutes poseen un buscador bibliograacutefico muy completo httproadecologyucdavisedu

The Reforestation reforestation and genetic resour-ces team (RNGR Team) Paacutegina web con gran canti-dad de informacioacuten sobre cultivo de plantas y teacutecni-cas de reforestacioacuten httpwwwrngrnet

Atlas de Idoneidad de especies lentildeosas de la Peniacuten-sula Ibeacuterica Puede ser uacutetil para ver si las especies lentildeosas elegidas son climaacuteticamente idoacuteneas para la zona de revegetacioacuten httpwwwopengisuabcatIdoneitatPIindexhtml

Servicio de extensioacuten Forestal de la Universidad de Oregon Tiene algunas publicaciones sobre planta-cioacuten y preparacioacuten del suelo httpextensionore-gonstateeducatalogdetailsphpsortnum=0520ampname=Reforestation

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ANEX

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2Sobre los autores y revisores del libro

Anexo

IacuteNDICE

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IacuteNDICE

ANEXO 2 Sobre los autores y revisores del libro

Este libro ha sido el resultado de una labor colectiva que ha permitido reunir experiencias y conocimien-tos dispares y complementarios en un tema que em-pieza a consolidarse aunque todaviacutea de forma frag-mentaria A continuacioacuten se describen brevemente los perfiles de los maacutes de treinta autores implicados en la obra y se indican los revisores externos de los textos e ideas incluidas en esta edicioacuten Todos los autores han participado en varias reuniones de coordinacioacuten de los capiacutetulos y han servido de revi-sores internos de uno o varios capiacutetulos adicionales a los que han participado para armonizar contenidos y estructura

Editores

Fernando Valladares es doctor en Ciencias Bioloacutegi-cas profesor de investigacioacuten del Consejo Superior de Investigaciones Cientiacuteficas (CSIC) y profesor aso-ciado de la Universidad Rey Juan Carlos Su investi-gacioacuten se centra en la ecologiacutea de los sistemas natu-rales afectados o amenazados por el cambio global y dedica importantes esfuerzos al estudio y a la do-cencia de aspectos relacionados con su restauracioacuten Actualmente su direccioacuten de trabajo es Centro de Museo Nacional de Ciencias Naturales CSIC Serrano 115 dpdo 28006 Madrid Maacutes informacioacuten en wwwvalladaresinfo E-mail valladaresccmacsices

Luis Balaguer Nuacutentildeez es profesor titular de Univer-sidad del Departamento de Biologiacutea Vegetal I de la Facultad de Biologiacutea de la Universidad Complutense de Madrid Es especialista en restauracioacuten ecoloacutegica

que entiende como una disciplina que se apoya en tres pilares la conservacioacuten del capital natural orientada a la provisioacuten de bienes valores y servi-cios ecosisteacutemicos la integracioacuten holiacutestica que con-templa ademaacutes de criterios cientiacuteficos criterios so-cioeconoacutemicos valores culturales y personales y la gestioacuten adaptativa entendida como estrategia para el manejo de sistemas complejos Maacutes informacioacuten en httplinneobioucmesbalaguer

Ignacio Mola Caballero de Rodas es licenciado en Ciencias Bioloacutegicas En la actualidad coordina los proyectos de investigacioacuten nacionales e internacio-nales en restauracioacuten de espacios afectados por obra civil desarrollados por la Direccioacuten de Innovacioacuten y Desarrollo de OHL Colabora en la docencia de tres maacutesteres oficiales y varias asignaturas en distintas universidades puacuteblicas de la Comunidad de Madrid Desde 2005 desarrolla su actividad investigadora en el aacutembito de la restauracioacuten ecoloacutegica de infraestruc-turas de transporte (UCM 910314) Actualmente su direccioacuten de trabajo es Servicio de I+D+i - OHL Pordm de la Castellana 259-D 28046-Madrid E-mail imo-laohles

Adriaacuten Escudero es doctor en Ciencias Bioloacutegicas y catedraacutetico de ecologiacutea en la Universidad Rey Juan Carlos Su intereacutes cientiacutefico se centra en diversos aspectos de ecologiacutea de poblaciones y comunidades de plantas Su investigacioacuten y docencia se enfocan con frecuencia a problemas ambientales concretos dentro del campo de la biologiacutea de la conservacioacuten Actualmente su direccioacuten de trabajo es Departamen-to de Biologiacutea y Geologiacutea Escuela Superior de Cien-cias Experimentales y Tecnologiacutea Universidad Rey Juan Carlos 28933 Madrid Maacutes informacioacuten en httpwwwesceturjcesbiodiversos E-mail adrianescuderourjces

Valentiacuten Alfaya es Licenciado en Ciencias Bioloacutegicas y diplomado en Ingenieriacutea y Gestioacuten Medioambien-tal por la EOI Trabajoacute en el sector forestal y de ingenieriacutea para pasar posteriormente a la construc-tora Ferrovial Agromaacuten donde se responsabilizoacute de la implantacioacuten del primer sistema de gestioacuten ambiental disentildeado para el sector En 2002 fue nombrado director de Calidad Prevencioacuten y Medio Ambiente y pasoacute a formar parte del Comiteacute de Di-reccioacuten Desde 2004 ocupa el puesto de director de Calidad y Medio Ambiente de Grupo Ferrovial Ha sido miembro de la Plataforma Tecnoloacutegica Europea de la Construccioacuten del Comiteacute de Medio Ambiente de la patronal de empresas constructoras (SEOPAN) y del Strategic Advisory Group de ISO entre otras instituciones Forma parte de la Comisioacuten de Medio

Ambiente de la CEOE y es secretario del comiteacute ejecutivo de Green Building Council Espantildea Im-parte docencia en diversas escuelas de negocios y centros universitarios Asimismo desarrolla su tesis doctoral en el Departamento de Biologiacutea Vegetal de la Universidad Complutense de Madrid E-mail valentinalfayaferroviales

Autores

Saturnino de Alba Alonso es doctor en Ciencias pro-fesor titular en el Departamento de Geodinaacutemica de la Universidad Complutense de Madrid y miembro del Instituto de Geociencias (CSIC-UCM) Su activi-dad cientiacutefica se centra en la conservacioacuten de suelos en medios agriacutecolas y forestales y en escenarios de restauracioacuten de espacios fuertemente modificados por actividades humanas como es el caso de las in-fraestructuras lineales Actualmente su direccioacuten de trabajo es Departamento de Geodinaacutemica Facultad de Ciencias Geoloacutegicas Universidad Complutense de Madrid CJoseacute Antonio Novais sn 28040 Madrid E-mail sdealbageoucmes

Jesuacutes Aacutelvarez es ingeniero de Caminos Canales y Puertos por la Universidad Politeacutecnica de Madrid y maacutester en Gestioacuten Ambiental por la EOI Es direc-tor de Medio Ambiente de Cintra Infraestructuras empresa liacuteder en la gestioacuten de infraestructuras de transporte con maacutes de 2500 kiloacutemetros de autopis-tas distribuidas por diferentes paiacuteses de Europa y Ameacuterica E-mail jalvarezcintraes

Francisco Xavier Artigas Iraegui es ingeniero de Mon-tes e ingeniero teacutecnico forestal por la Universitat de Lleida Su vida laboral se ha centrado en los uacuteltimos antildeos en la evaluacioacuten ambiental de planes progra-mas y proyectos principalmente de infraestructuras lineales Actualmente su direccioacuten de trabajo es Ofi-cina Territorial de Evaluacioacuten Ambiental Servicios Te-rritoriales del Departamento de Medio Ambiente y Vi-vienda en Tarragona Vidal i Barraquer 12-14 43005 Tarragona E-mail xavierartigasgencatcat

Fernando Barbero Abolafio es licenciado en Cien-cias Geoloacutegicas e investigador predoctoral en la Universidad Complutense de Madrid Su investiga-cioacuten se centra en la erosioacuten hiacutedrica en suelos de clima mediterraacuteneo Actualmente estaacute estudiando los procesos de erosioacuten hiacutedrica que tienen lugar en taludes de carretera de la Cuenca de Madrid para poder aplicar criterios geomorfoloacutegicos y tratamien-tos al suelo que prevengan la erosioacuten hiacutedrica y fa-vorezcan una correcta revegetacioacuten Su direccioacuten de

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IacuteNDICE

trabajo es Departamento de Geodinaacutemica Facultad de Ciencias Geoloacutegicas Universidad Complutense de Madrid CJoseacute Antonio Novais 28040 Madrid E-mail ferbarabgeoucmes

Esther Bochet es doctora en Biologiacutea por la Universi-dad Catoacutelica de Lovaina (KUL Beacutelgica) Tras ser con-tratada por el programa Ramoacuten y Cajal disfruta en la actualidad de un contrato de doctora en el Centro de Investigaciones sobre Desertificacioacuten (CIDE) donde desarrolla sus investigaciones sobre las interaccio-nes entre vegetacioacuten y erosioacuten del suelo asiacute como su aplicacioacuten a la restauracioacuten de ecosistemas me-diterraacuteneos semiaacuteridos degradados Actualmente su direccioacuten de trabajo es Centro de Investigaciones sobre Desertificacioacuten-CIDE Carretera de Moncada a Naacutequera km 45 Apdo Oficial 46113 Moncada (Va-lencia) E-mail estherbochetuves

Valentiacuten Contreras Medrano es ingeniero teacutecnico agriacute-cola Director General del Grupo de empresas Bonte-rra Ibeacuterica ndash Paisajes del Sur (BPS GROUP) para el tratamiento integral del suelo Experto en materiales y teacutecnicas de restauracioacuten del paisaje ha desarrollado su actividad teacutecnica y empresarial desde 1992 E-mail valentincontrerasbonterraibericacom

Jordi Cortina Segarra es profesor titular de Ecologiacutea en la Universidad de Alicante Su trabajo se ha concen-trado en el estudio de la degradacioacuten de los ecosis-temas semiaacuteridos y su restauracioacuten Actualmente estaacute estudiando el funcionamiento de algunos ecosistemas mediterraacuteneos asiacute como teacutecnicas para la restauracioacuten de ecosistemas degradados incluyendo algunas fases de la produccioacuten de planta en vivero y la utilizacioacuten de residuos orgaacutenicos para la recuperacioacuten de la ferti-lidad de suelos degradados E-mail jordiuaes

Tiacutescar Espigares Pinilla es profesora titular de Ecolo-giacutea de la Universidad de Alcalaacute Su investigacioacuten se centra en el estudio de la ecohidrologiacutea de ecosis-temas restaurados con especial eacutenfasis en las inte-racciones entre vegetacioacuten y escorrentiacutea superficial en los procesos de sucesioacuten ecoloacutegica Asimismo ha analizado la aplicacioacuten de la evaluacioacuten del impac-to ambiental en Espantildea en lo referente a proyectos de infraestructuras lineales Departamento de Eco-logiacutea Universidad de Alcalaacute Campus Universitario Ctra Madrid-Barcelona Km 33600 28871 Alcalaacute de Henares (Madrid) E-mail mtiscarespigaresuahes

Joacirco Paulo Fernandes es licenciado en Ingenieriacutea Am-biental en 1983 en la Universidad Nueva de Lisboa donde se doctoroacute en 1992 en Ciencias Ambientales Actualmente es profesor asociado en la Universidad

de Eacutevora y responsable de la Licenciatura en Inge-nieriacutea Biofiacutesica Es especialista en temas de Ingenie-riacutea Natural y de Caracterizacioacuten y Evaluacioacuten Ambien-tal habiendo desarrollado investigaciones en estos campos y participado como Consultor en numerosos Estudios de Evaluacioacuten de Impacto Ambiental y Pro-cesos de Planificacioacuten Es fundador y presidente de APENA ndash Asociacioacuten Portuguesa de Ingenieriacutea Natu-ral

Jorge Fort Llaacutecer es ingeniero agroacutenomo con espe-cialidad en Ciencias del Suelo y Gestioacuten del Medio Ambiente Desde 1998 es director teacutecnico del Depar-tamento de Medio Ambiente de la empresa Projar SA que cuenta entre sus proyectos con numerosas teacutecnicas de revegetacioacuten de taludes E-mail jorgeprojares

Pablo Garciacutea-Palacios es licenciado en Ciencias Ambientales por la Universidad Rey Juan Carlos e investigador predoctoral del proyecto EXPERTAL fi-nanciado por la Fundacioacuten Biodiversidad CSIC Uni-versidad Rey Juan Carlos y Cintra SA Actualmente realiza su tesis doctoral sobre las implicaciones de las interacciones planta-suelo en la restauracioacuten de taludes de carretera Su direccioacuten de trabajo es Universidad Rey Juan Carlos Escuela Superior de Ciencias Experimentales y Tecnologiacutea Aacuterea de Bio-diversidad y Conservacioacuten Despacho II-230 CTuli-paacuten sn 28933 Moacutestoles (Madrid) E-mail pablopalaciosurjces

Patricio Garciacutea-Fayos es investigador cientiacutefico del Consejo Superior de Investigaciones Cientiacuteficas (CSIC) y desarrolla su actividad profesional en el Centro de Investigaciones sobre Desertificacioacuten-(CIDE) desde 1989 Su intereacutes investigador se centra fundamentalmente en los procesos de colonizacioacuten vegetal en ecosistemas mediterraacuteneos y semiaacuteridos y en la ecologiacutea y evolucioacuten de la interaccioacuten entre las plantas y la erosioacuten del suelo Actualmente su direccioacuten de trabajo es Centro de Investigaciones sobre Desertificacioacuten-CIDE Carretera de Moncada a Naacutequera km 45 Apdo Oficial 46113 Moncada (Va-lencia) E-mail PatricioGarcia-Fayosuves

Carlos Iglesias Merchaacuten es ingeniero de Montes (UPM) y licenciado en Ciencias Ambientales (UAM) posee larga experiencia en la redaccioacuten de proyectos y estudios de impacto ambiental de infraestructuras de transporte actualmente en ACCIONA INGENIERIacuteA (antes AEPO) y en vigilancia ambiental de obra Ade-maacutes es profesor asociado de la Universidad Politeacutec-nica de Madrid y actual presidente de ECOPAacuteS Ac-tualmente su direccioacuten de trabajo es ECOPAacuteS Apdo

de Correos 150 28760 Tres Cantos (Madrid) E-mail carlosiglesiasmerchanaccionaes

Juan E Malo Arraacutezola es doctor en Ciencias Bioloacute-gicas y profesor titular de Ecologiacutea de la Universi-dad Autoacutenoma de Madrid forma parte del Grupo de Ecologiacutea y Conservacioacuten de Sistemas Terrestres del Departamento de Ecologiacutea de dicha universidad Su intereacutes se centra en las interacciones ecoloacutegicas en-tre la fauna y las actividades humanas con especial atencioacuten en la evaluacioacuten de impacto ambiental de las infraestructuras y la fragmentacioacuten de haacutebitats E-mail jemalouames

Joseacute Francisco Martiacuten Duque es doctor en Ciencias Geoloacutegicas profesor titular en el Departamento de Geodinaacutemica de la Universidad Complutense de Ma-drid y miembro del Instituto de Geociencias (CSIC-UCM) Su intereacutes se centra en el establecimiento de criterios geomorfoloacutegicos para la restauracioacuten y re-habilitacioacuten de terrenos afectados por movimientos de tierras (como mineriacutea o infraestructuras lineales) Actualmente su direccioacuten de trabajo es Departamen-to de Geodinaacutemica Facultad de Ciencias Geoloacutegicas Universidad Complutense de Madrid CJoseacute Antonio Novais 28040 Madrid

Javier Martiacutenez de Castilla Colomer es ingeniero agroacute-nomo por la Universitat Politeacutecnica de Catalunya Jefe del Departamento de Medio Ambiente de la Direccioacuten Teacutecnica de Ferrovial Agromaacuten desarrolla desde 1986 toda su actividad en la evaluacioacuten ambiental y disentildeo de medidas en el aacutembito de la obra civil tanto en Espantildea como Reino Unido Estados Unidos Portugal Irlanda Polonia e Italia entre otros paiacuteses Miembro del Comiteacute de Medio de la Asociacioacuten Teacutecnica de la Carretera E-mail jmcastillaferroviales

Marisa Martiacutenez Diacuteez es ingeniera teacutecnica forestal por la Universidad Politeacutecnica de Madrid En los uacuteltimos 17 antildeos ha desarrollado su actividad pro-fesional en el sector medioambiental Actualmente trabaja en la empresa Ingenieriacutea de los Recursos Na-turales (IRENA) como jefe del Departamento Teacutecnico participando en obras y proyectos de restauracioacuten paisajiacutestica jardineriacutea y trabajos forestales E-mail mmartinezgrupopacsaes

Cristina Mata Estacioacute es investigadora posdoctoral del Grupo de Ecologiacutea y Conservacioacuten de Sistemas Terres-tres del Departamento de Ecologiacutea de la Universidad Autoacutenoma de Madrid Su principal aacuterea de investiga-cioacuten se centra en el seguimiento y evaluacioacuten de medi-das correctoras destinadas a reducir la fragmentacioacuten de haacutebitats causada por infraestructuras de transporte

Luis Merino Martiacuten es licenciado en Ciencias Ambien-tales y doctor en Cambio Global y Desarrollo Soste-nible por la Universidad de Alcalaacute Su investigacioacuten se centra en ecohidrologiacutea de ecosistemas degrada-dos particularmente los derivados de la restaura-cioacuten minera Actualmente trabaja en restauracioacuten de bosques tropicales en Guatemala Departamento de Ecologiacutea Universidad de Alcalaacute Campus Universita-rio Ctra Madrid-Barcelona Km 33600 28871 Alcalaacute de Henares (Madrid) E-mail luismerinouahes

Mariano Moreno de las Heras es investigador post-doctoral en la Universidad de Newcastle (Australia) Licenciado en Ciencias Ambientales y Doctor por la Universidad de Alcalaacute Sus investigaciones se centran en aspectos ecohidroloacutegicos de ambientes aacuteridos y semiaacuteridos particularmente en las interacciones en-tre la dinaacutemica vegetal y los procesos hidroloacutegicos superficiales (erosioacuten y sedimentacioacuten generacioacuten de escorrentiacutea y distribucioacuten espacial de la hume-dad del suelo) en el marco actual de cambios en el clima y los usos del territorio Faculty of Engineer-ing and Built Environment School of Engineering The University of Newcastle Callaghan NSW 2308 Australia E-mail MarianoMorenodelasherasnew-castleeduau

Joseacute Manuel Nicolau Ibarra es profesor titular de Ecologiacutea en la Universidad de Zaragoza Su inves-tigacioacuten se centra en ecohidrologiacutea de ambientes semiaacuteridos y de aacutereas mineras restauradas y en di-sentildeos geomorfoloacutegicos para restauraciones mineras Escuela Politeacutecnica Superior de Huesca Universidad de Zaragoza Carretera de Cuarte sn 22071 Huesca E-mail nicolauunizares

Begontildea Peco es doctora en Biologiacutea en 1982 y cate-draacutetica de Ecologiacutea de la Universidad Autoacutenoma de Madrid Tiene maacutes de 100 publicaciones cientiacuteficas muchas de ellas en revistas de impacto internacional como Journal of Ecology Oikos Journal of Vegetation Science Landscape Ecology etc y ha dirigido siete tesis doctorales y numerosos proyectos fin de carrera y fin de maacutester Especialista en dinaacutemica de la vege-tacioacuten herbaacutecea con eacutenfasis en la dispersioacuten de semi-llas estructura y dinaacutemica de los bancos de semillas y supervivencia de plaacutentulas Actualmente su direccioacuten de trabajo es Departamento de Ecologiacutea Universidad Autoacutenoma de Madrid 28049 Cantoblanco Madrid E-mail begonnapecouames

Joseacute Luis Quero es licenciado en Biologiacutea por la Universidad de Coacuterdoba doctor en Biologiacutea Ambiental por la Universidad de Granada e in-vestigador de la Universidad Rey Juan Carlos Sus

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liacuteneas de trabajo se centran en la ecologiacutea de co-munidades vegetales y su relacioacuten con la ecolo-giacutea funcional con especial intereacutes en la aplica-cioacuten de sus resultados a la restauracioacuten Actual-mente su direccioacuten de trabajo es Departamento de Biologiacutea y Geologiacutea Escuela Superior de Ciencias Experimentales y Tecnologiacutea Universidad Rey Juan Carlos 28933 Moacutestoles Madrid E-mail joseque-rourjces

Santiago Soliveres Codina es doctor en Ciencias Ambientales por la Universidad Rey Juan Carlos Realiza su trabajo en el marco del proyecto EXPER-TAL financiado por la Fundacioacuten Biodiversidad CSIC Universidad Rey Juan Carlos y Cintra SA Su especialidad es el estudio de las interacciones planta-planta y su aplicacioacuten a la restauracioacuten E-mail santiagosoliveresurjces

Jaume Tormo es doctor en Biologiacutea su tesis doc-toral tratoacute sobre restauracioacuten de taludes de carre-teras Actualmente disfruta de un contrato Juan de la Cierva en la Universidad de Alicante Su trabajo se centra en el estudio de la ecologiacutea y la restau-racioacuten de ambientes semiaacuteridos Actualmente su direccioacuten de trabajo es IMEM Ramon Margalef-Universidad de Alicante Carretera San Vicente del Raspeig sn 03690 San Vicente del Raspeig ndash Ali-cante E-mail jautorblagmailcom

Pedro Villar-Salvador es doctor en Biologiacutea por la Universidad de Valencia y actualmente es profesor de Ecologiacutea en el Departamento de Ecologiacutea de la Universidad de Alcalaacute Tambieacuten es editor asocia-do de la revista cientiacutefica New Forests Su intereacutes cientiacutefico son la ecologiacutea funcional y ecofisiologiacutea de plantas lentildeosas mediterraacuteneas asiacute como las teacutecnicas de cultivo en vivero e implantacioacuten en campo de la vegetacioacuten lentildeosa mediterraacutenea Su direccioacuten de contacto es Departamento de Ecolo-giacutea Universidad de Alcalaacute 28871 Alcalaacute de Hena-res (Madrid) E-mail pedrovillaruahes

Revisores externos

bull Revisor externo del Capiacutetulo 2

Avelino Garciacutea Investigador del CIEMAT Madrid

bull Revisor externo del Capiacutetulo 4

Antonio Gallardo Correa Profesor titular de la Uni-versidad Pablo de Olavide Sevilla

bull Revisores externos del Capiacutetulo 5

Montse Jorba Peiroacute Investigadora Fundacioacuten Bosch Gimpera Departamento de Biologiacutea Vege-tal Facultad de Biologiacutea Universidad de Barce-lona

Carolina Martinez Ruiz Profesora titular de la Univer-sidad de Valladolid Aacuterea de Ecologia (Departamento de Ciencias Agroforestales) ETSIIAA de Palencia Campus ldquoLa Yuterardquo Palencia

bull Revisores externos del Capiacutetulo 6

Luis Ocantildea Bueno Jefe de Departamento de Medio Natural Direccioacuten Adjunta de I+D+i RampD Unit Grupo Tragsa C Juliaacuten Camarillo 6b - planta 4ordf - sector d 28037 Madrid

Roberto Ontantildeoacuten Bioacutelogo Iniciativas Medioambien-tales IMAVE SL C El Cantildeo 5 24231 Cembranos Leoacuten

bull Revisores externos del Capiacutetulo 8

Encarna Peacuterez Aguilera Direccioacuten General de Carrete-ras e Infraestructuras Consejeriacutea de Fomento Junta de Castilla y Leoacuten

Salvador Peris Aacutelvarez y Viacutector Colino Rabanal De-partamento de Biologiacutea Animal Parasitologiacutea Ecolo-giacutea Edafologiacutea y Quiacutemica Agriacutecola Facultad de Bio-logiacutea Universidad de Salamanca

bull Revisores externos del Capiacutetulo 9

Rafael Escribano Bombiacuten Profesor titular del Depar-tamento de Proyectos y Planificacioacuten Rural Universi-dad Politeacutecnica de Madrid

Germaacuten Glariacutea Galceraacuten Director de la EUIT Forestal y ex director general de Calidad y Evaluacioacuten Am-biental del Ministerio de Medio Ambiente

bull Revisores externos del Capiacutetulo 10

Mauricio Goacutemez Villarino Doctor ingeniero de Ca-minos Canales y Puertos IDOM - Director Corpo-rativo

Santiago Gonzaacutelez Alonso Catedraacutetico de Proyectos y Planificacioacuten y ex subdirector general de Planifi-cacioacuten y Normativa del Ministerio de Obras Puacuteblicas y Urbanismo

Fernando Valladares

Luis Balaguer

Ignacio Mola

Adriaacuten Escudero

Valentiacuten Alfaya

Restauracioacuten ecoloacutegica de aacutereas afectadaspor infraestructuras de transporte

Vivimos en un mundo atravesado por carreteras liacuteneas de tren gasoductos y tendidos eleacutectricos Aunque nos hemos acostumbrado a ello los sistemas naturales no En este libro se revisan los impactos principales de la alteracioacuten ambiental que implica la creacioacuten y el uso de las infraestructuras lineales y se abordan los principales criterios cientiacutefi cos para reconducir y atenuar estos impactos Pero el libro no es solo un tratado cientiacutefi co sino que incluye ingredientes clave como los aspectos teacutecnicos y el marco legal para que sirva de referencia uacutetil y completa a quienes les interese la restauracioacuten ecoloacutegica de estos nuevos ecosistemas generados con la construccioacuten de infraestructuras lineales El libro busca estimular la interaccioacuten feacutertil entre cientiacutefi cos y teacutecnicos para abordar un tema ambiental legal social y econoacutemicamente complejo como es el de queacute ocurre y queacute conviene hacer con las aacutereas afectadas por estas infraestructuras Para contribuir a esta interaccioacuten el libro reuacutene el trabajo y la experiencia de maacutes de treinta expertos y recopila la informacioacuten de numerosos proyectos tanto de investigacioacuten como de construccioacuten y de restauracioacuten aportando una seleccioacuten clave de referencias bibliograacutefi cas y recursos disponibles en internet

Fortuny 7 28010 MadridT 91 121 09 2o F 91 121 09 31biodiversidadfundacion-biodiversidadeswwwfundacion-biodiversidades

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Los editores de este libro auacutenan experiencias profesionales complementarias incluso contrastadas ya que mientras tres de ellos provienen del aacutembito acadeacutemico los otros dos realizan su trabajo en el seno de empresas privadas Los cinco comparten el intereacutes por el impacto de las infraestructuras lineales sobre el medio natural y llevan muchos antildeos recopilando informacioacuten y participando en diversos proyectos con el fi n de comprender mejor estos impactos y como atenuarlos Las ideas teoacutericas desde el campo de la ecologiacutea que Fernando Valladares Luis Balaguer y Adriaacuten Escudero han ido destilando como resultado de su investigacioacuten han debido combinarse por un lado con el conocimiento de la realidad a pie de obra que Valentiacuten Alfaya ha acumulado durante el seguimiento de numerosos proyectos de construccioacuten y por otro con la experiencia de Ignacio Mola quien auacutena ambos intereses cientiacutefi cos y de empresa como coordinador de proyectos en restauracioacuten de I+D+i en el aacutembito de la construccioacuten y explotacioacuten de infraestructuras La necesidad de combinar visiones y experiencias les ha llevado a colaborar con frecuencia y el resultado de ese cruce feacutertil entre la ciencia y la teacutecnica entre el mundo de las ideas y el marco tozudo de una realidad compleja es lo que ha dado origen a este libro

Restauracioacuten ecoloacutegica de aacutereas afectadas

por infraestructuras de transporte

Bases cientiacutefi cas para soluciones teacutecnicas

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Page 2: Restauración ecológica de áreas afectadas por

Fernando Valladares

Luis Balaguer

Ignacio Mola

Adriaacuten Escudero

Valentiacuten Alfaya

Restauracioacuten ecoloacutegica de aacutereas afectadaspor infraestructuras de transporte

Vivimos en un mundo atravesado por carreteras liacuteneas de tren gasoductos y tendidos eleacutectricos Aunque nos hemos acostumbrado a ello los sistemas naturales no En este libro se revisan los impactos principales de la alteracioacuten ambiental que implica la creacioacuten y el uso de las infraestructuras lineales y se abordan los principales criterios cientiacutefi cos para reconducir y atenuar estos impactos Pero el libro no es solo un tratado cientiacutefi co sino que incluye ingredientes clave como los aspectos teacutecnicos y el marco legal para que sirva de referencia uacutetil y completa a quienes les interese la restauracioacuten ecoloacutegica de estos nuevos ecosistemas generados con la construccioacuten de infraestructuras lineales El libro busca estimular la interaccioacuten feacutertil entre cientiacutefi cos y teacutecnicos para abordar un tema ambiental legal social y econoacutemicamente complejo como es el de queacute ocurre y queacute conviene hacer con las aacutereas afectadas por estas infraestructuras Para contribuir a esta interaccioacuten el libro reuacutene el trabajo y la experiencia de maacutes de treinta expertos y recopila la informacioacuten de numerosos proyectos tanto de investigacioacuten como de construccioacuten y de restauracioacuten aportando una seleccioacuten clave de referencias bibliograacutefi cas y recursos disponibles en internet

Fortuny 7 28010 MadridT 91 121 09 2o F 91 121 09 31biodiversidadfundacion-biodiversidadeswwwfundacion-biodiversidades

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Los editores de este libro auacutenan experiencias profesionales complementarias incluso contrastadas ya que mientras tres de ellos provienen del aacutembito acadeacutemico los otros dos realizan su trabajo en el seno de empresas privadas Los cinco comparten el intereacutes por el impacto de las infraestructuras lineales sobre el medio natural y llevan muchos antildeos recopilando informacioacuten y participando en diversos proyectos con el fi n de comprender mejor estos impactos y como atenuarlos Las ideas teoacutericas desde el campo de la ecologiacutea que Fernando Valladares Luis Balaguer y Adriaacuten Escudero han ido destilando como resultado de su investigacioacuten han debido combinarse por un lado con el conocimiento de la realidad a pie de obra que Valentiacuten Alfaya ha acumulado durante el seguimiento de numerosos proyectos de construccioacuten y por otro con la experiencia de Ignacio Mola quien auacutena ambos intereses cientiacutefi cos y de empresa como coordinador de proyectos en restauracioacuten de I+D+i en el aacutembito de la construccioacuten y explotacioacuten de infraestructuras La necesidad de combinar visiones y experiencias les ha llevado a colaborar con frecuencia y el resultado de ese cruce feacutertil entre la ciencia y la teacutecnica entre el mundo de las ideas y el marco tozudo de una realidad compleja es lo que ha dado origen a este libro

Restauracioacuten ecoloacutegica de aacutereas afectadas

por infraestructuras de transporte

Bases cientiacutefi cas para soluciones teacutecnicas

Restauracioacuten ecoloacutegica de aacutereas afectadaspor infraestructuras de transporte

Fernando Valladares | Luis Balaguer | Ignacio Mola

Adriaacuten Escudero | Valentiacuten Alfaya

Bases cientiacuteficas para soluciones teacutecnicas

Proacutelogos 7

Agradecimientos 11

1 Restauracioacuten ecoloacutegica e infraestructuras de transporte definiciones problemas y desafiacuteosLuis Balaguer Fernando Valladares e Ignacio Mola 15

2 Consideraciones geomorfoloacutegicas e hidroloacutegicasJoseacute F Martiacuten Duque Saturnino de Alba y Fernando Barbero Abolafio 43

3 Ecohidrologiacutea erosioacuten hiacutedrica y dinaacutemica de la vegetacioacuten en laderas artificialesJoseacute Manuel Nicolau Tiscar Espigares Mariano Moreno de las Heras y Luis Merino-Martiacuten 75

4 Importancia del suelo para la restauracioacuten de la cubierta vegetalPablo Garciacutea-Palacios 85

5 Procesos ecoloacutegicos y restauracioacuten de la cubierta vegetalEsther Bochet Pablo Garciacutea-Palacios Begontildea Peco Jaume Tormo y Patricio Garciacutea-Fayos 101

6 Introduccioacuten de especies lentildeosasPedro Villar-Salvador Santiago Soliveres y Joseacute Luis Quero 143

7 Ecotecnologiacutea aplicada a la restauracioacuten de infraestructuras de transporteSantiago Soliveres Valentiacuten Contreras Joatildeo Paulo Fernandes Jordi Cortina Pablo Garciacutea-Palacios Marisa Martiacutenez y Jorge Fort 177

8 Actuaciones para minimizar los efectos sobre la faunaJuan E Malo y Cristina Mata 213

9 Seguimiento y vigilancia ambientalCarlos Iglesias Santiago Soliveres Valentiacuten Alfaya Je-suacutes Aacutelvarez Ignacio Mola Javier Martiacutenez de Castilla y Xavier Artigas 243

10 LegislacioacutenCarlos Iglesias Luis Balaguer Ignacio Mola y Valentiacuten Alfaya 275

11 Restauracioacuten ecoloacutegica e infraestructuras de transporte perspectivas y recomendacionesLuis Balaguer Fernando Valladares Adriaacuten Escudero Ignacio Mola y Valentiacuten Alfaya 303

Anexo 1 Fuentes recomendadas de informacioacuten adicional 311

Anexo 2 Sobre los autores y revisores del libro 317

Restauracioacuten ecoloacutegica de aacutereas afectadas por infraestructuras de transporte Bases cientiacuteficas para soluciones teacutecnicas

Publicado por

Fundacioacuten Biodiversidad

Editores

Fernando Valladares Luis Balaguer Ignacio Mola Adriaacuten Escudero y Valentiacuten Alfaya

Esta publicacioacuten ha sido posible gracias a la colaboracioacuten de

Ferrovial S A Priacutencipe de Vergara 135 - 28002 Madrid (Espantildea) Tel (+34) 91 586 25 00 wwwferrovialcom

Obrascoacuten Huarte Laiacuten S A Torre Espacio Paseo de la Castellana 259D - 28046 Madrid (Espantildea) Tel (+34) 91 348 41 00 wwwohles

Disentildeo maquetacioacuten e impresioacuten

AGSM Artes Graacuteficas wwwagsmartesgraficases

Depoacutesito Legal AB-338-2011

Fotografiacuteas las fotografiacuteas que aparecen en este libro son propiedad exclusiva de sus autores En caso de no sentildealarse expliacutecitamente su autoriacutea pertenecen a los autores del capiacutetulo correspondiente

Cita recomendada

Valladares F Balaguer L Mola I Escudero A y Alfaya V eds 2011 Restauracioacuten ecoloacutegica de aacutereas afectadas por infraestructuras de transporte Bases cientiacuteficas para soluciones teacutecnicas Fundacioacuten Biodiversidad Madrid Espantildea copyFundacioacuten Biodiversidad 2011

Impreso en papel certificado FSCreg

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Teresa Ribera RodriacuteguezSecretaria de Estado de Cambio ClimaacuteticoVicepresidenta de la Fundacioacuten Biodiversidad

La conservacioacuten de la ldquodiversidad de la vidardquo como define la biodiversidad el Convenio sobre Diversidad Bioloacutegica se ha revelado como un componente cla-ve del desarrollo sostenible Del buen funcionamien-to de los ecosistemas depende el futuro econoacutemico social y cultural del paiacutes Sin embargo las presiones que amenazan esta diversidad son numerosas Entre otros factores el aumento de infraestructuras linea-les de transporte ha sido identificado como uno de los motivos de peacuterdida de biodiversidad relevantes en la actualidad

Las infraestructuras viarias son el escenario en el que cada diacutea se desenvuelven millones de perso-nas La superficie que ocupan en Espantildea ha tenido un ritmo de crecimiento exponencial en las uacuteltimas deacutecadas suponiendo en la actualidad alrededor de 1 del territorio El avance que estas suponen en teacuterminos de movilidad y de impulso econoacutemico debe ir acompantildeado de una evaluacioacuten ambiental para co-nocer sus consecuencias sobre el patrimonio natural y la biodiversidad y de esta forma buscar foacutermulas que permitan minimizar sus impactos tal como estaacute previsto por la legislacioacuten de evaluacioacuten ambiental

Desde el Ministerio de Medio Ambiente y Medio Rural y Marino trabajamos para preservar el buen estado de los ecosistemas y para restaurar su fun-cionalidad como viacutea para mantener los importantes servicios que prestan a la sociedad Por ello somos conscientes de la importancia de seguir avanzando

en la integracioacuten de las poliacuteticas sectoriales en este caso las poliacuteticas de movilidad y transporte con las poliacuteticas ambientales Es un reto que nos compete a todas las administraciones y cuyas exigencias baacute-sicas nos marca la ley 422007 de 13 de diciembre del Patrimonio Natural y de la Biodiversidad y la legislacioacuten vigente sobre evaluacioacuten ambiental

Por ello a traveacutes de la Fundacioacuten Biodiversidad y desde el 2006 se ha trabajado en colaboracioacuten con el Consejo Superior de Investigaciones Cientiacuteficas la Universidad Rey Juan Carlos y Cintra para desarro-llar el proyecto EXPERTAL ldquoElaboracioacuten de las bases experimentales para la sostenibilidad ecoloacutegica de los taludes de autopistasrdquo El objetivo ha sido esta-blecer las bases ecoloacutegicas que regulan el desarro-llo de las comunidades vegetales en los taludes de carreteras y autopistas en las distintas condiciones ambientales de la Peniacutensula Ibeacuterica

Este libro recoge las conclusiones de este estudio Aunque se ha querido ir maacutes allaacute para ofrecer un texto completo que recopile y sintetice los trabajos de otros grupos de investigacioacuten Desde estas liacuteneas queremos agradecer a todos los que han intervenido su valiosa aportacioacuten Estamos convencidos de que serviraacute para disentildear ejecutar y mantener los taludes de las infraestructuras lineales de transporte de una manera maacutes eficiente Como bien concluye el libro el futuro pasa por tener infraestructuras maacutes sostenibles y mejor integradas en el entorno que les rodea

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Luis Garciacutea-Linares GarciacuteaDirector General Corporativo del Grupo OHL

Supone para miacute un placer presentar este libro que creo que viene a cubrir una carencia en la literatura divul-gativa y teacutecnica en restauracioacuten de espacios afectados por la construccioacuten de infraestructuras Me gustariacutea por ello agradecer en primer lugar a la Fundacioacuten Biodiver-sidad la oportunidad brindada para hacerlo realidad

Se trata esta de una disciplina joven pero a la que se intuye una creciente relevancia si consideramos algunos de los datos que se exponen de forma rigu-rosa a lo largo de estas paacuteginas Asiacute aspectos como el porcentaje que suponen en los paiacuteses desarrolla-dos los espacios afectados por las infraestructuras sobre el total de su superficie o el volumen de mo-vimiento de tierra que generan en su construccioacuten comparado con los producidos por los fenoacutemenos geoloacutegicos tradicionales invitan a dejar de pensar en ellos como meras superficies marginales Todo ello unido a la singularidad de los ecosistemas ge-nerados con estas actuaciones ofrece una nueva perspectiva acerca de la importancia que supone para nuestras sociedades ampliar el conocimiento sobre estas materias y acerca de la responsabilidad con que deben actuar todos los agentes implicados

Consciente de esta realidad el Grupo OHL especializa-do en construccioacuten y explotacioacuten de infraestructuras a nivel internacional lleva implicado activamente desde 2003 en la I+D relacionada con la integracioacuten ambiental y la reduccioacuten del impacto de esta enfocada a identifi-car y desarrollar las medidas y teacutecnicas maacutes adecuadas y con menores incertidumbres en su resultado

Para recorrer este camino en OHL hemos tenido el privilegio de establecer una colaboracioacuten continua-da con el prestigioso equipo de investigacioacuten del Dr Luis Balaguer de la Universidad Complutense de Madrid que tambieacuten ha participado activamente en la preparacioacuten de este libro que el lector tiene entre sus manos Tras maacutes de 8 antildeos abordando proyec-tos en comuacuten se ha logrado cristalizar un equipo mixto de investigacioacuten integrado por profesionales de la universidad y de la empresa que rompe el toacute-pico de la falta de comunicacioacuten entre ambos mun-dos Esta colaboracioacuten nos ha permitido optimizar el retorno de los trabajos de I+D+i en forma de experiencia y resultados aplicados progresivamen-te en nuestras liacuteneas de produccioacuten (construccioacuten y explotacioacuten)

Hasta el momento la liacutenea de investigacioacuten indus-trial en restauracioacuten de espacios afectados por la construccioacuten de infraestructuras de OHL ha dado lugar a dos proyectos finalizados otros tantos en curso y alguno maacutes en fase de lanzamiento Se tra-ta de una liacutenea asentada exitosa y con proyeccioacuten internacional que ha aportado a este libro algunos resultados relevantes

Por uacuteltimo me gustariacutea felicitar y agradecer sus aportaciones a todos los autores que han traslada-do su conocimiento y experiencia a estas paacuteginas que estoy seguro supondraacuten una valiosa referencia teacutecnica y cientiacutefica en el futuro de esta incipiente y ciertamente relevante disciplina

Iacutentildeigo Meiraacutes Amusco Consejero Delegado de Ferrovial

En tiempos las carreteras se construiacutean adaptaacutendo-se a la topografiacutea del terreno respetando las curvas de nivel de los accidentes geograacuteficos que atrave-saban De esta manera el trazado se adecuaba al relieve y en cierto sentido al paisaje circundante minimizando el impacto medioambiental de estas infraestructuras Actualmente las nuevas autopistas y ferrocarriles suponen indiscutibles mejoras para la calidad de vida poblaciones antes lejanas se han aproximado en la misma medida en que se ha incre-mentado la velocidad de los vehiacuteculos que circulan por nuestras infraestructuras mejorando ademaacutes la seguridad para los usuarios y para los habitantes de la zona Pero al mismo tiempo los trazados se han hecho maacutes exigentes implicando en ocasiones ingentes movimientos de tierras que conllevan la al-teracioacuten de los ecosistemas que se asentaban en el entorno de la nueva infraestructura

La mitigacioacuten de este impacto pasa como es sabido por la restauracioacuten de los ecosistemas dantildeados si no en su integridad siacute en una medida suficiente como para recuperar una gran parte de su valor en teacuterminos ecoloacutegicos funcionales y por queacute no tambieacuten cultu-rales Por ello todos los agentes que intervenimos di-rectamente en la planificacioacuten disentildeo y construccioacuten de estas infraestructuras estamos obligados a encon-trar soluciones cada vez maacutes eficientes para restaurar el medio natural afectado por las obras

Hace casi dos deacutecadas el profesor Jourdain se pre-guntaba ldquoiquestPor queacute querer imponer una cubierta ve-getal proyeccioacuten de nuestra imaginacioacuten sobre un

terreno para el que la Naturaleza tiene ya su propio proyectordquo En Ferrovial una de las mayores empresas de infraestructuras del mundo estamos convencidos de que el disentildeo de mejores medidas de restauracioacuten ambiental pasa sin duda por entender queacute hace la propia naturaleza para reconstruir los sistemas afecta-dos por un impacto de estas caracteriacutesticas Con toda seguridad los proyectos de restauracioacuten maacutes eficien-tes teacutecnica y econoacutemicamente seraacuten aquellos que en cierta medida ayuden a la naturaleza a recuperarse por siacute misma sacando el maacuteximo partido a los pro-cesos ecoloacutegicos que operan en estas circunstancias

Para avanzar en este conocimiento desde hace casi diez antildeos trabajamos con instituciones como el Con-sejo Superior de Investigaciones Cientiacuteficas la Univer-sidad Complutense la Universidad Rey Juan Carlos de Madrid y maacutes recientemente la Fundacioacuten Biodiversi-dad El manual que usted tiene ahora en sus manos re-coge los resultados de investigacioacuten generados por di-versos grupos de investigadores en todos estos antildeos Los avances se han concretado en diversas soluciones teacutecnicas que gestores e ingenieros podraacuten aplicar en futuros proyectos de restauracioacuten ambiental teacutecnica y econoacutemicamente maacutes eficientes que los actuales

En Ferrovial esperamos que este innovador texto contribuya a sentar las bases de lo que los cientiacutefi-cos han dado en llamar ldquorestauracioacuten ecoloacutegicardquo y que en definitiva no es sino actuar con maacutes inte-ligencia y eficiencia aprendiendo de la naturaleza para facilitar la integracioacuten ecoloacutegica de las infraes-tructuras de transporte del futuro

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AGRADECIMIENTOS lo que ha hecho posible este libro

Este libro es una labor colectiva en el maacutes amplio sentido No solo por reunir a maacutes de 30 especialistas que han acabado como coautores del mismo sino por conseguir la participacioacuten de representantes de los colectivos maacutes diversos cientiacuteficos profesores estudiantes de doctorado teacutecnicos de la adminis-tracioacuten responsables de empresas de construccioacuten e infraestructuras teacutecnicos en restauracioacuten y pro-duccioacuten forestal autoridades en el mundo de la legislacioacuten ambiental y en planes de seguimiento etc Combinar opiniones informacioacuten y experiencia de autores tan dispares ha sido todo un reto pero tambieacuten un punto de partida en esta aventura de cuya experiencia hemos salido todos enriquecidos Durante el antildeo de gestacioacuten de este libro hemos sufrido numerosos desafiacuteos personales para com-patibilizar este esfuerzo con nuestras obligaciones habituales Por suerte pudimos con todo y creemos con honestidad que el resultado habla por siacute mis-mo Estamos convencidos de que nuestro trabajo marca un hito que sentaraacute precedente al conseguir reunir a los principales agentes implicados en este complejo mundo de la restauracioacuten ecoloacutegica Con-fiamos en que sea una aportacioacuten uacutetil para andar el largo camino que deberiacutean recorrer necesariamente de la mano los diversos agentes econoacutemicos ins-tituciones y expertos implicados en la integracioacuten ambiental de las infraestructuras de transporte y en la restauracioacuten de las aacutereas afectadas por estas La relacioacuten detallada de agradecimientos de una obra asiacute seriacutea muy larga y seguro que siempre incomple-ta recogemos a continuacioacuten los principales hitos y apoyos que hicieron este libro posible y pedimos disculpas por las omisiones en que podamos incurrir

La Fundacioacuten Biodiversidad se brindoacute desde un prin-cipio a correr con los gastos de la impresioacuten del libro dando por tanto ese necesario soporte para cristalizar un proyecto que veniacuteamos acariciando desde haciacutea mucho tiempo El apoyo de Ignacio To-rres y el buen hacer de Raquel Palomeque han sido esenciales en este sentido Queremos manifestar de forma expliacutecita el enorme apoyo de dos grupos de empresas del mundo de la construccioacuten y las infra-estructuras el grupo Ferrovial y el grupo OHL que han alentado la necesidad de que todos los agentes nos reunamos alrededor de una mesa para hacer posible esta obra y que han apoyado las iniciativas cientiacuteficas que han precedido a este libro Dentro de estas se cuentan un buen nuacutemero de proyectos de investigacioacuten como TALMED (Bases ecoloacutegicas para la restauracioacuten de taludes en aacutereas de clima medite-rraacuteneo TALMED REN 2001-2313) proyecto financia-do por el Ministerio de Ciencia y Tecnologiacutea (actual-mente Ministerio de Ciencia e Innovacioacuten) en 2001 y Ferrovial y que sirvioacute de arranque para muchas de las ideas que aquiacute han cristalizado A TALMED le han seguido muchos otros entre los que destacan EX-PERTAL (Bases experimentales para la sostenibilidad ecoloacutegica de los taludes de autopistas) resultado de un convenio entre el CSIC la Universidad Rey Juan Carlos (Madrid) CINTRA y la Fundacioacuten Bio-diversidad durante los antildeos 2006 y 2010 Por su parte OHL ha realizado otros tantos proyectos de investigacioacuten entre los que podemos destacar los ya finalizados como HIDROTAL (Desarrollo de crite-rios y meacutetodos para evaluar el eacutexito de la restaura-cioacuten de taludes mediante hidrosiembra) que contoacute con ayudas del Ministerio de Ciencia e Innovacioacuten

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(PROFIT FIT-050000-2003-36 FIT-310200-2004-101 CIT-310200-2005-100) y del Centro para el Desarrollo Tecnoloacutegico e Industrial (CDTI OHL-04-0391) reali-zado entre 2003 y 2006 o RECOTAL (Restauracioacuten ecoloacutegica de espacios afectados por la construccioacuten de infraestructuras) que tambieacuten contoacute con ayu-das de los citados organismos (PROFIT CIT-310200-2007-24 CDTI IDI-20080334) durante el periodo 2007-2008 Ambos proyectos llegaron a buen puerto gracias a la imprescindible colaboracioacuten de Univer-sidad Complutense de Madrid Maacutes recientemente la red REMEDINAL2 (lsquoRestauracioacuten y conservacioacuten de los ecosistemas madrilentildeos Respuesta frente al cambio globalrsquo S2009AMB-1783) de la Comunidad de Madrid ha permitido maximizar las interacciones

cientiacuteficas entre distintos grupos cientiacuteficos y empre-sas con sede en Madrid favoreciendo las circunstan-cias que han conducido a este libro

El libro se ha beneficiado de la informacioacuten graacutefica disponible por editores y autores Ademaacutes de las numerosas figuras y fotografiacuteas que se han apor-tado para ilustrar las ideas expresadas en el texto el libro ha incorporado una coleccioacuten de las me-jores imaacutegenes del fondo documental de Ferrovial y del grupo de fauna de la Universidad Autoacutenoma de Madrid asiacute como los aportes de autores indi-viduales como Ignacio Mola Joseacute Francisco Martiacuten Duque Marisa Martiacutenez Santiago Soliveres y Pa-blo Garciacutea Palacios

Fernando Valladares Luis Balaguer Ignacio Mola Adriaacuten Escudero y Valentiacuten Alfaya

Restauracioacuten ecoloacutegica e infraestructuras de transporte definiciones problemas y desafiacuteos

Luis Balaguer Fernando Valladares e Ignacio Mola

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I EL CONCEPTO DE RESTAURACIOacuteN ECOLOacuteGICA EN EL CONTEXTO DE LA OBRA CIVIL

1 Teacuterminos y conceptos

En el contexto de la obra civil han proliferado diversos teacuterminos para describir el tratamiento de los espacios afectados por la construccioacuten de infraestructuras El enunciado maacutes difuso es el de ordenacioacuten ecoloacutegica esteacutetica y paisajiacutestica en el que no se identifican obje-tivos sino uacutenicamente el aacutembito de las acciones pro-puestas Esta foacutermula suma a su escasa definicioacuten el caraacutecter fragmentario de la enumeracioacuten de teacuterminos al no conseguir integrar en una sola estrategia discipli-nas que deberiacutean converger en el entorno de la obra civil Maacutes concreto pero igualmente poco comprome-tido es el teacutermino revegetacioacuten entendida como el establecimiento de un tapiz o cubierta vegetal En el otro extremo de ambicioacuten se encontrariacutea el tiacutetulo de numerosos proyectos que comienzan con expresiones como recuperacioacuten del medio natural Recuperacioacuten es un teacutermino engantildeoso porque sugiere la reversibi-lidad de las acciones ejecutadas Lamentablemente el tiempo transcurre en un solo sentido y solo excepcio-nalmente es posible reconstruir o reponer el mosaico de ecosistemas inicial Medio natural es igualmente desafortunado Muchos de los paisajes considerados como paradigmaacuteticos de lsquonaturaleza bien conservadarsquo son el resultado de la interaccioacuten secular o milena-ria del hombre con su entorno encinares castantildeares choperas carrizales praderas etc Es esta interaccioacuten la que confiere singularidad a algunos de los espacios

CAPIacuteTULO 1 Restauracioacuten ecoloacutegica e infraestructuras de transporte definiciones problemas y desafiacuteos

Luis Balaguer Fernando Valladares e Ignacio Mola

naturales protegidos de este territorio Por uacuteltimo es erroacuteneo posicionar al ser humano y a sus actividades al margen de lo lsquonaturalrsquo en el campo de lo lsquoartificialrsquo

De modo general el proyecto para el tratamiento de los espacios afectados por las obras se articu-la en torno a los potenciales impactos ambientales Desde los Reales Decretos 13021986 y 11311988 se establece que los estudios de evaluacioacuten de im-pacto ambiental deben proponer las actuaciones ne-cesarias para evitar reducir o compensar los efectos ambientales negativos significativos Estas acciones reciben el nombre de medidas protectoras (o preven-tivas) correctoras y compensatorias respectivamen-te La Ley 12008 de Evaluacioacuten de Impacto Ambien-tal sumada a sus homoacutelogas autonoacutemicas extiende el dominio de aplicacioacuten de estas definiciones en el aacutembito de las infraestructuras lineales

La Ley 82001 de Carreteras de Andaluciacutea propone dos teacuterminos integracioacuten ambiental y restauracioacuten paisajiacutestica La intencioacuten es establecer una diferen-cia entre la ejecucioacuten de las medidas preventivas y correctoras establecidas en la declaracioacuten de im-pacto ambiental (integracioacuten ambiental) de aquellas otras adicionales que persigan con mayor rigor y detalle la revegetacioacuten del dominio puacuteblico viario y del entorno afectado para su mejor integracioacuten en el paisaje local (restauracioacuten paisajiacutestica)

Es probable que expresiones como recuperacioacuten del medio natural o restauracioacuten paisajiacutestica respondan a una demanda social de conservacioacuten del patrimonio de la biodiversidad y del paisaje pero sobre todo de

mejora de la calidad de vida del usuario y de los resi-dentes en zonas proacuteximas a la infraestructura En esta coyuntura aparece procedente de otro aacutembito una nueva visioacuten la de la restauracioacuten ecoloacutegica

2 Una nueva visioacuten

La restauracioacuten ecoloacutegica entendida como la colabo-racioacuten al desarrollo de un determinado mosaico de co-munidades de organismos con el fin de mejorar la ca-lidad integral de los ecosistemas y su expresioacuten como paisaje constituye una herramienta primordial dentro de los planes de conservacioacuten y gestioacuten de especies y espacios El teacutermino restauracioacuten integra los dos objetivos que persiguen las actuaciones a) orientar el dinamismo espontaacuteneo del sistema hacia un de-terminado mosaico de comunidades de organismos y b) acelerar el proceso que espontaacuteneamente habriacutea tardado en suceder un tiempo maacutes dilatado o no ha-briacutea ocurrido por siacute mismo El epiacuteteto ecoloacutegica hace referencia a los criterios y meacutetodos utilizados por el restaurador El disentildeo de protocolos para la recupera-cioacuten de poblaciones comunidades y haacutebitats supone un reto tanto cientiacutefico como teacutecnico En el aacutembito cientiacutefico el desarrollo de contenidos que sustenten el concepto y la praxis de la restauracioacuten ha generado una nueva siacutentesis de la teoriacutea ecoloacutegica basada en la reflexioacuten sobre la dimensioacuten del impacto antropo-geacutenico en el planeta El intento de reunir las piezas del puzle ensamblarlas y que el conjunto funcione de una determinada forma plantea hipoacutetesis relevantes sobre la ecologiacutea y evolucioacuten de los organismos y sistemas (Figura 1)

Figura 1 La cobertura vegetal de este terrapleacuten generado durante la construccioacuten de una autopista no se debe al eacutexito de la hidrosiembra realizada ya que las especies presentes no estaban incluidas en el coctel de semillas aplicado sino a la germinacioacuten espontaacutenea de espe-cies anuales que alcanzaron este escenario mediante dos posibles viacuteas bien por dispersioacuten natural desde el entorno (matriz) bien al estar incluidas sus semillas en el extendido de tierra vegetal que se realizoacute de forma previa a la ejecucioacuten de la hidrosiembra (Foto Ignacio Mola)

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Las primeras propuestas teacutecnicas implicaban costes ecoloacutegicos y econoacutemicos inaceptables beneficios fugaces o se basaban en concepciones erroacuteneas Estas deficiencias se han visto agravadas por la aplicacioacuten de teacutecnicas y criterios agronoacutemicos in-apropiados en el marco de la restauracioacuten ecoloacutegi-ca La influencia de estos criterios auacuten se manifiesta en numerosos proyectos de obra que persiguen la integracioacuten paisajiacutestica de aacutereas degradadas pero recomiendan el aporte de nutrientes el extendido de una gruesa capa de sustrato feacutertil y la evalua-cioacuten del eacutexito de las siembras atendiendo a valores de cobertura sin que en ninguno de estos casos se contemplen como referente las caracteriacutesticas de la matriz circundante no alterada Los planteamien-tos basados en una filosofiacutea agronoacutemica tienen un espacio restringido pero de enorme intereacutes en el contexto de la restauracioacuten La restauracioacuten de am-plias superficies frecuentemente conlleva el reto de generar mosaicos en los que se integren paisajes agrarios que supongan la disponibilidad de nuevos recursos para las poblaciones humanas afectadas o constituyan por siacute mismos un patrimonio natural por su alta diversidad bioloacutegica o cultural como resultado secular de una interaccioacuten sostenible del hombre con su medio En el aacutembito de la obra civil los protocolos de inspiracioacuten agronoacutemica se han justificado aludiendo a que el objetivo prioritario de la revegetacioacuten es la estabilizacioacuten del sustrato de los taludes generados por la construccioacuten de infraestructuras Por ello se seleccionan y siembran linajes de especies de germinacioacuten y crecimiento raacutepido se abona y se riega Este planteamiento teoacuterico que vincula las praacutecticas de inspiracioacuten agronoacutemica con la estabilidad geoteacutecnica contrasta con la realidad en obra De hecho los taludes se siembran semanas o meses despueacutes de haberse abierto (Figura 2) los dientes de los cazos de las retroexcavadoras abren canales que evolucionan en regueros y caacutercavas y sobre todo la erosioacuten superficial podriacutea paliarse con una red de drenaje adecuada y un acabado maacutes estable

Frente a estos planteamientos agronoacutemicos el cambio cualitativo en el disentildeo de paisajes en el contexto de la restauracioacuten ha sido el compren-der que el objetivo no es reunir una coleccioacuten de

elementos caracteriacutesticos para recrear un paisaje sino operar sobre variables ecoloacutegicas clave de for-ma que se inicie y acelere un proceso espontaacuteneo de cicatrizacioacuten Maacutes que en la recuperacioacuten de la composicioacuten la atencioacuten se debe centrar en la re-paracioacuten de procesos como la hidrologiacutea el ciclo de nutrientes o la captacioacuten de energiacutea El nuevo paradigma de la restauracioacuten basa las estrategias de actuacioacuten en una intervencioacuten miacutenima sobre los procesos autogeacutenicos del sistema Por ello estas actuaciones deben representar un coste econoacutemico reducido y ser efectivas en vastas superficies lo cual es apropiado cuando el objetivo que se persi-gue es el establecimiento de una cubierta vegetal de escaso o nulo mantenimiento soporte de un uso muacuteltiple que pueda incluir desde la conserva-cioacuten de la diversidad bioloacutegica hasta la explotacioacuten agropecuaria y forestal o el turismo

Figura 2 Aspecto de los taludes de un desmonte de la autoviacutea M-12 diacuteas antes de proceder a su hidrosiembra Se observan los canales generados por los dientes de los cazos de las retroexcavadoras que han sido ampliados por erosioacuten generando regueros y pequentildeos desprendimientos (Foto Ignacio Mola)

II EL ENTORNO DE LAS INFRAESTRUCTURAS DE TRANSPORTE

Todas las obras civiles denominadas infraestructuras lineales entre las que destacan las infraestructuras de transporte comparten el hecho de que una de sus dimensiones la longitud predomina sobre las otras dos lo cual tiene estas dos importantes im-plicaciones

1 Generan corredores con su doble accioacuten como conectores y barreras

2 Atraviesan una elevada variedad de medios lo que a su vez conlleva

bull Gran diversidad de normas aplicables (leyes de aguas costas montes conservacioacuten de la naturaleza etc)

bull Numerosas expropiaciones con los consi-guientes cambios de uso

bull Disentildeos complejos dado que deben respon-der a una importante variacioacuten del entorno

El resultado de las obras genera un nuevo escenario en el que la restauracioacuten ecoloacutegica en general y la reve-getacioacuten en particular deben contribuir a resolver tam-bieacuten cuestiones relacionadas con el funcionamiento de la infraestructura En el caso de carreteras por ejem-plo se trata de evitar deslumbramientos y la hipnosis del conductor y la reduccioacuten del peligro marginal

En el caso de las infraestructuras de transporte los condicionantes teacutecnicos obligan a realizar impor-tantes movimientos de tierra (Figura 3) El volumen y destino de dichos movimientos depende de la

diferencia de cota entre la rasante de la viacutea y la topografiacutea y la pendiente de los taludes con que se disentildee la seccioacuten tipo de la infraestructura En caso de que la rasante se encuentre a una cota superior a la del terreno seraacute necesario efectuar un relleno con materiales de aportacioacuten que se denomina terra-pleacuten Por el contrario se denomina desmonte cuan-do es necesario excavar para realizar la explanacioacuten de la infraestructura porque la rasante se situacutea por debajo de la cota del nivel natural del terreno (Figu-ra 4) Las superficies inclinadas que resultan a lo lar-go de un terrapleacuten o de un desmonte se denominan taludes en el primer caso taludes de terrapleacuten y en el segundo caso taludes de desmonte La estrategia a seguir por el responsable de la obra debe ser com-pensar las tierras y asiacute minimizar la necesidad de recurrir a preacutestamos y vertederos Es importante sa-ber que aunque no esteacute incluido en las actividades de restauracioacuten el movimiento de tierras representa un monto en el presupuesto que por lo general es varios oacuterdenes de magnitud superior al de las actuaciones del capiacutetulo de restauracioacuten y su coor-dinacioacuten con estas actividades posteriores permitiriacutea no solo ganar en eficacia sino potenciales ahorros econoacutemicos para la constructora

Ademaacutes de taludes los espacios en los que se ejecu-tan medidas correctoras ambientales en el entorno de la infraestructura incluyen preacutestamos (generados como consecuencia de la extraccioacuten de materiales constructivos) vertederos (en los que se vierten las tierras no compensadas) parques de maquinaria plantas de asfaltado y hormigonado zonas de aco-pios temporales viario de acceso a la obra entre otras aacutereas de instalaciones auxiliares de obra

Figura 3 Vista aeacuterea de las obras de la variante de El Molar en la A-1 Se puede apreciar la magnitud del impacto producido por el movimiento de tierras y la construccioacuten de un viaducto (Foto OHL)

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Figura 4a Esquema de la construccioacuten de una carretera sobre una ladera 1 Seccioacuten de la ladera sobre la que se va a construir una in-fraestructura lineal de transporte terrestre 2 Se superpone el plano de la plataforma de la viacutea y se oscurece la zona de la ladera que se veraacute afectada por el movimiento de tierras 3 Se realiza un desbroce de toda la vegetacioacuten de la zona afectada 4 Se retiran los 30-40 cm superficiales del aacuterea afectada denominada lsquotierra vegetalrsquo que seraacute acopiada por un tiempo variable hasta su posterior extendido sobre los nuevos planos originados tras los movimientos de tierra 5 Esquema en planos trasluacutecidos de los movimientos de tierra necesarios 6 A la izquierda aparece el volumen de tierra que seraacute necesario excavar para el desmonte y a la derecha el volumen de tierra que seraacute necesario acopiar para construir el terrapleacuten La diferencia entre ambos voluacutemenes se denomina balance del movimiento de tierras si es lt0 es decir se necesita acopiar un volumen superior al que se va a excavar la obra es deficitaria en tierra luego necesitaraacute de una can-tera o preacutestamo de donde obtener este volumen necesario de tierra Por el contrario si es gt0 el volumen de tierra excavado es superior al necesario para acopiar la obra es excedentaria en tierra lo que implica la necesidad de un vertedero donde depositar los voluacutemenes sobrantes Si es =0 los movimientos de tierra estaacute equilibradoscompensados es la situacioacuten oacuteptima ya que no seraacute necesario ocupar espacios adicionales 7 Perfil final tras realizar los movimientos de tierra Quedan construidos tanto el desmonte como el terrapleacuten (se colorea en tono maacutes oscuro el terrapleacuten para diferenciarlo respecto al perfil original) 8 Lo habitual es que sobre los terraplenes se realice tras su construccioacuten un extendido de tierra vegetal de 30-40 cm En desmonte a no ser que sean muy tendidos es decir de pendiente muy baja no se realiza este tipo de actividad (Figura Ignacio Mola)

Figura 4b Resultado de la construccioacuten de la carretera sobre una ladera La superficie ocupada por los taludes (de excavacioacuten o desmonte y de acumulacioacuten o terrapleacuten) constituye junto con las medianas bermas zonas interiores de enlaces etc los principales espacios a restaurar y las dianas maacutes importantes de las actuaciones correctoras y de integracioacuten paisajiacutestica de las infraestructuras de transporte (Figura Ignacio Mola)

III IMPACTOS VARIADOS SOBRE LOS ECOSISTEMAS

La creacioacuten de infraestructuras de transporte ge-nera un amplio nuacutemero de impactos sobre los ecosistemas por los que transcurre La ocupacioacuten del suelo los movimientos y compactacioacuten de tie-rras y la generacioacuten de preacutestamos y vertederos ocasionan un impacto directo en la peacuterdida de la cubierta vegetal y de suelo original con todas sus propiedades bioloacutegicas (Figura 5) El traacutensito de vehiacuteculos y sus emisiones sonoras y gaseosas generan otros efectos indirectos maacutes difiacuteciles de cuantificar (Figura 6) A estos se suman impactos esteacuteticos y paisajiacutesticos ademaacutes de aquellos que afectan a la provisioacuten de bienes y servicios eco-sisteacutemicos Los impactos ecoloacutegicos de la cons-truccioacuten explotacioacuten y eventual deconstruccioacuten son por tanto difiacuteciles de valorar y muchos estaacuten apenas comenzando a conocerse

Figura 5 Movimiento de tierras y generacioacuten de taludes durante la construccioacuten de una autopista (Foto Nerea Aizpurua y Adoracioacuten Goacutemez)

Cuneta

Desmonte

Drenajes del desmonte

Mediana

Terrapleacuten

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Figura 6 Emisioacuten de polvo sobre la vegetacioacuten La fase de cons-truccioacuten genera numerosos impactos sobre la flora y la fauna in-cluyendo el polvo la contaminacioacuten atmosfeacuterica y el ruido (Foto Nerea Aizpurua y Adoracioacuten Goacutemez)

Cuando desaparece la cubierta vegetal por causa de los desbroces o del movimiento de tierras la capa de suelo feacutertil se queda sin el efecto protector que le proporcionaban las raiacuteces y el dosel vegetal En los eventos de lluvia que tengan lugar a continuacioacuten el agua de escorrentiacutea arrastraraacute la capa superior maacutes feacutertil y que contiene propaacutegulos y semillas formaacuten-dose surcos y regueros de difiacutecil colonizacioacuten por las plantas El sustrato que queda despueacutes de que se produzcan fenoacutemenos erosivos importantes es muy pobre y muchas veces demasiado duro para que las semillas puedan enraizar Este efecto se produce es-pecialmente en zonas de elevada pendiente como en los desmontes y terraplenes La peacuterdida de suelo y vegetacioacuten a su vez ejerce una influencia direc-ta e indirecta sobre otros organismos dando lugar a ecosistemas simplificados y poco resilientes es decir con baja capacidad de recuperacioacuten despueacutes de ser perturbados Este ciacuterculo vicioso requiere in-tervencioacuten o de lo contrario se pone en peligro la propia estabilidad de las infraestructuras (Figura 7)

Figura 7 Grandes procesos erosivos tras una lluvia intensa en la Autopista de la Costa del Sol (Maacutelaga) (Foto Fernando Valladares)

La construccioacuten de toda infraestructura viaria desde una perspectiva espacial supone la fragmentacioacuten de los haacutebitats es decir la transformacioacuten del terri-torio al resultar subdividido en fragmentos menores y aislados con la consiguiente reduccioacuten de conec-tividad El tamantildeo de estos fragmentos de territorio condiciona en gran medida la dinaacutemica de las po-blaciones naturales y los patrones de distribucioacuten de numerosos organismos entre los que destacan los vertebrados grupo bioloacutegico sobre el que se han centrado diversos estudios (Robinson et al 1992) producieacutendose incluso una reduccioacuten de la riqueza especiacutefica en las teselas de menor superficie favore-ciendo la aparicioacuten de especies introducidas y aque-llas autoacutectonas maacutes comunes en detrimento de las maacutes especializadas y escasas (Bennett 1990 Gilbert et al 1998) Asiacute mismo producto de esta reduccioacuten de la conectividad las poblaciones de vertebrados pueden quedar subdivididas en poblaciones de me-nor tamantildeo y por ello sometidas a un mayor riesgo de extincioacuten puesto que resultan maacutes sensibles a los fenoacutemenos estocaacutesticos e imprevisibles como incendios sequiacuteas o perturbaciones de origen antroacute-pico (Andrews 1990 Forman y Alexander 1998) La fragmentacioacuten de haacutebitats es un proceso que integra muacuteltiples efectos entre los que destacan la peacuterdi-da y reduccioacuten de calidad del haacutebitat el aumento de la mortalidad por atropello y la modificacioacuten de la conectividad del paisaje Proceso que constitu-ye una de las principales amenazas para especies con amplias aacutereas de campeo siendo el lince ibeacuterico (Lynx pardina) un claro ejemplo de ello (Ferreras et al 1992 Iglesias Merchaacuten 2009) y en suma para la biodiversidad en general (Trombulak y Frissell 2000 Forman et al 2003) comprometiendo el equilibro entre el desarrollo socioeconoacutemico y la conservacioacuten de la fauna

Ademaacutes de los impactos generales ya comenta-dos podemos destacar las siguientes considera-ciones

bull La modificacioacuten del relieve original por los movi-mientos de tierra modifica las redes de drenaje y expone grandes superficies susceptibles de ero-sioacuten y por lo tanto capaces de emitir enormes cantidades de sedimentos lo que produce seve-ras modificaciones en las redes hidrograacuteficas del entorno

bull La peacuterdida o alteracioacuten del haacutebitat no se limita a la zona directamente afectada por la infraes-tructura sino que puede afectar a zonas aleja-das maacutes de 200 metros desde el borde de la misma

bull Las infraestructuras lineales pueden actuar como barrera para la dispersioacuten de algunas especies limi-tando su extensioacuten pero tambieacuten facilitan la disper-sioacuten de especies exoacuteticas con caraacutecter invasor

bull Las infraestructuras lineales son efectivas para la propagacioacuten de enfermedades pudiendo oca-sionar impactos importantes en las poblaciones vegetales y animales

bull La dispersioacuten de otras especies no deseables a traveacutes de la infraestructura viaria puede tener a su vez efectos secundarios en las comunidades nativas

bull Los elementos asociados a la infraestructura tales como puentes y tuacuteneles generan corredores fren-te a barreras geograacuteficas (riacuteos mares cordilleras montantildeosas etc) lo que puede dar lugar a la apa-ricioacuten de especies nuevas para la zona con efectos complejos sobre la red de interacciones bioloacutegicas

bull La peacuterdida de la vegetacioacuten de ribera cuando la infraestructura atraviesa riacuteos o zonas lacustres (Figura 8) provoca alteraciones en la dinaacutemica geomorfoloacutegica del cauce afectando a su esta-bilidad y su potencia hidraacuteulica La peacuterdida de la vegetacioacuten de ribera puede afectar a las carac-teriacutesticas fiacutesico-quiacutemicas del agua y a la calidad general del cauce

bull Las sales empleadas para eliminar el hielo en las carreteras y otros productos quiacutemicos que se antildeaden en la fase de explotacioacuten o uso de la infraestructura modifican las propiedades fiacutesico-quiacutemicas del suelo tales como la conductividad y el pH Las plantas se ven muy afectadas por la toxicidad producida por el aumento en las con-centraciones de iones del suelo y la dificultad para captar agua de eacutel Estas modificaciones pue-den favorecer la aparicioacuten de nuevas comunida-des de plantas y animales formadas por especies tolerantes a la sal (comunidades haloacutefilas)

bull El viento que se crea por el paso de los coches o por la apertura de corredores tiene un impacto adicional sobre las comunidades vegetales y ani-males adyacentes

bull Las emisiones de los vehiacuteculos las partiacuteculas pro-cedentes del deterioro de los neumaacuteticos las peacuter-didas de aceite el ruido y otro tipo de molestias pueden extenderse desde el borde de la carretera a una distancia variable produciendo impactos diversos sobre las comunidades naturales

bull El polvo generado por el traacutefico depositado so-bre las hojas puede afectar a los procesos de fotosiacutentesis y transpiracioacuten de las plantas

bull Las actividades asociadas a las carreteras como estaciones de servicio aacutereas de peaje control y mantenimiento etc generan ademaacutes diversos impactos adicionales

Figura 8 Peacuterdida de la vegetacioacuten de ribera por el paso supe-rior de la Autopista R4 Esta peacuterdida provoca a su vez impactos en la estructura y funcionamiento del riacuteo (Foto Nerea Aizpurua y Adoracioacuten Goacutemez)

Todos estos impactos y muchos maacutes de los que auacuten no somos conscientes requieren una actua-cioacuten previa y posterior para evitarlos atenuarlos o corregirlos En la mayoriacutea de los casos el primer objetivo es hacer frente a las nuevas superficies generadas Los taludes son junto con zonas inte-riores de enlaces preacutestamos vertederos y demaacutes zonas no asfaltadas de la plataforma el foco prin-cipal de las actuaciones de restauracioacuten Y el primer paso se da actuando sobre la vegetacioacuten O sobre la falta de ella

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IV REVEGETACIOacuteN DE TALUDES UN PRIMER PASOhellip iquestEN FALSO

En el disentildeo de taludes la revegetacioacuten y la obra civil siguen criterios contrapuestos (principio de in-compatibilidad) Si el establecimiento de una cubier-ta vegetal requiere sustratos francos que faciliten la progresioacuten subterraacutenea del vegetal la estabilidad estructural de la obra exige que los taludes de te-rrapleacuten se encuentren altamente compactados Por ello los terraplenes se construyen mediante suce-sivas tongadas de unos 30 cm de potencia y los desmontes sufren un refino mediante ripado o vola-duras en liacuteneas con retardadores La acusada dismi-nucioacuten de la porosidad del suelo da lugar a una su-perficie impenetrable de escasa permeabilidad que alcanza temperaturas maacutes elevadas que el entorno para el desarrollo de la microflora y fauna edaacutefica La disparidad de criterios se repite en relacioacuten con el contenido del sustrato en materia orgaacutenica Su valor como fuente de nutrientes y sobre todo su capacidad de retencioacuten hiacutedrica favorece el desarrollo vegetal al tiempo que compromete la estabilidad de los taludes

La solucioacuten habitual a este conflicto implica un compromiso entre los objetivos de la restaura-cioacuten y la obra civil que se traduce en la reali-zacioacuten de labores someras destinadas a facilitar la germinacioacuten y el enraizamiento inicial Estas medidas consisten en el extendido de tierra ve-getal cuya potencia oscila entre 15 y 30 cm o en el uso de mulches o acolchados definidos como recubrimientos permeables de materiales orgaacuteni-cos naturales o sinteacuteticos biodegradables que favorecen la retencioacuten de agua y reducen el ries-go de erosioacuten

El eacutexito de estas labores posteriores depende de variables clave entre las que destacan

1 La pendiente Cuanto maacutes vertical es un talud mayor dificultad ofrece para la revegetacioacuten y mayores son los costes La pendiente es un cociente entre la diferencia de cota (v) y la pro-yeccioacuten horizontal de la distancia recorrida (h) en este caso por un talud Los proyectos de obra suelen determinar una inclinacioacuten para te-rraplenes de 2h1v y para los desmontes maacutes tendidos de 3h2v referidos asiacute tradicional-mente por aplicacioacuten del sistema acotado o de planos acotados al trazado de las infraes-tructuras Por encima de este uacuteltimo valor no

se realizan aportes de tierra vegetal De hecho a medida que la inclinacioacuten se aproxima a este umbral se agrava el riesgo de inestabilidad que en caso de manifestarse no solo cancela el efecto benefactor de estos aportes sobre la cubierta sino que resultariacutea en costosos ate-rramientos de las cunetas Este riesgo se incre-menta a medida que aumenta la potencia de la capa extendida y la longitud de los taludes Para pendientes iguales o superiores a 11 los proyectos de obra no suelen proponer medidas restauradoras

La inclinacioacuten interacciona con variables ambien-tales relevantes como la interceptacioacuten de ra-diacioacuten solar la temperatura y la disponibilidad hiacutedrica Estas interacciones dependen tambieacuten de la orientacioacuten de los taludes Asiacute en taludes orientados a solana una mayor inclinacioacuten deter-mina una mayor exposicioacuten a la radiacioacuten mien-tras que en umbriacutea el incremento de la pendiente tiene el efecto contrario

2 Calidad de la tierra vegetal Es probablemente el factor maacutes determinante del eacutexito de las actuaciones Su accioacuten es muacuteltiple fertilidad por su contenido en materia orgaacutenica y nu-trientes aporte del banco de semilla y de sim-biontes (hongos micorrizoacutegenos y bacterias fijadoras de nitroacutegeno) penetrabilidad gracias a su efecto sobre la textura higroscopicidad y pH En aquellos taludes en los que no se extiende por ahorrar costes por tratarse de desmontes o por su excesiva pendiente la re-vegetacioacuten es notablemente maacutes lenta y en ocasiones infructuosa El acopio de la tierra vegetal durante los movimientos de tierras ge-nerados durante la fase de construccioacuten de la infraestructura es un aspecto delicado que afecta a la utilidad y valor para la restauracioacuten de la tierra vegetal (Figura 9)

3 Carestiacutea de nutrientes Se intenta resolver a corto plazo mediante el uso de fertilizantes solubles y en un creciente nuacutemero de ocasiones con abonos de liberacioacuten lenta Sin embargo el aporte es con frecuencia insuficiente y resulta determinante el contenido en nutrientes del extendido de tierra vegetal que a su vez favorece su retencioacuten y su uso gradual por la vegetacioacuten

Figura 9 La denominada en obra ldquotierra vegetalrdquo se corresponde con los primeros 30-40 cm del suelo que se retira de todas las superficies que se veraacuten afectadas por movimientos de tierra En esta capa estaacuten importantes nutrientes y sobre todo numerosas semillas que permitiraacuten la regeneracioacuten de la cubierta vegetal El almacenamiento de la tierra vegetal es criacutetico no puede mantenerse mucho tiempo porque se pierde la viabilidad de muchas semillas Tambieacuten es criacutetico el efecto dilucioacuten del banco de semillas al mezclarse con otros sustratos o suelos sin semillas o al decantarse (Figura Ignacio Mola)

4 Interaccioacuten con la obra civil Las principales fuen-tes de conflicto son

bull Realizacioacuten de siembras y plantaciones fuera de eacutepoca como consecuencia de las exigencias del plan de obra Dado que el proyecto suele exigir dos antildeos de garantiacutea el contratista se encuentra con un mayor volumen de marras a reponer Este hecho puede encarecer el presupuesto de revege-tacioacuten hasta en un 50

bull Retraso de las siembras En este caso al igual que si lloviera torrencialmente antes de que se cumplieran 15 diacuteas tras la diseminacioacuten de las semillas es de esperar que se disparen fenoacutemenos erosivos y de inestabilidad de

taludes Es notable que maacutes del 10 de las siembras suele repetirse

bull Efectos negativos derivados de la simultanei-dad entre obra civil y restauracioacuten caiacuteda de escombros paso de maquinaria etc

bull Perfilado o refino de taludes con posterioridad a la ejecucioacuten de siembras y plantaciones o al esta-blecimiento espontaacuteneo de una cubierta vegetal

bull Vertido de los materiales procedentes de la lim-pieza de cunetas sobre los taludes sembrados plantados o cubiertos por vegetacioacuten espontaacutenea

bull Instalacioacuten de pasarelas drenajes o medios auxiliares en taludes revegetados previamente

3-5 cm banco desemillas viable

30 cm retiradoscomo tierra vegetal

La tierra vegetal retirada se acopla durante un periodo

de tiempo variable El banco de semillas se diluye por 10

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5 Deficiencias en la ejecucioacuten de los trabajos Las labores de revegetacioacuten de los taludes se realizan en el tramo final del periodo de ejecucioacuten de la infraestructura El balance econoacutemico adverso la multiplicidad de subcontratas la inmediatez de la fecha de entrega la exigencia de un acabado pa-tentemente verde en la inauguracioacuten son causas frecuentes de errores y efectos no deseados

Figura 10 La hidrosiembra es una teacutecnica habitual para sembrar semillas en amplias superficies como los taludes que se generan al crear viacuteas de transporte La hidrosembradora consiste en un vehiacutecu-lo equipado con un tanque o cisterna en cuyo interior se mantiene en el coacutectel en permanente agitacioacuten para asegurar una mezcla homogeacutenea Los modelos de mayores dimensiones como el que aparece en la imagen cuentan con una torreta en la parte superior desde la cual proyectar con una manguera la siembra (Foto Mariacutea Altamirano OHL)

6 Conflicto de intereses entre objetivos propuestos del proyecto de restauracioacuten En la mayoriacutea de los proyectos se proponen como objetivos indepen-dientes la atenuacioacuten de los impactos ambientales y el acondicionamiento esteacutetico En consecuencia se plantean para estos objetivos medidas correcto-ras independientes cuando en la praacutectica interac-cionan Asiacute es frecuente encontrar que las especies ornamentales elegidas para las plantaciones linea-les en las maacutergenes de la viacutea son especies exoacuteticas con un reconocido caraacutecter invasor De esta forma se da la paradoja de que sobre la superficie del ta-lud se valora positivamente la inclusioacuten de especies autoacutectonas aportadas en el coacutectel de hidrosiembra o con las plantaciones y sin embargo en medianas o a pie de talud se favorece a las especies aloacutectonas capaces de propagarse con facilidad y transformar el medio dificultando el ingreso de ejemplares au-toacutectonos o incluso alcanzando espacios naturales en los que su establecimiento puede causar graves dantildeos ambientales

En resumen la revegetacioacuten de taludes es un pri-mer paso habitual en la restauracioacuten de aacutereas afectadas por infraestructuras de transporte pero su ejecucioacuten se apoya frecuentemente en criterios agronoacutemicos y no ecoloacutegicos Ademaacutes colisiona con numerosos aspectos teacutecnicos y praacutecticos re-lativos a la planificacioacuten construccioacuten y funciona-miento de las infraestructuras

V EL SALTO DE LA PRAacuteCTICA ACTUAL A LA APLICACIOacuteN DE LOS PRINCIPIOS DE LA RESTAURACIOacuteN ECOLOacuteGICA

El procedimiento habitual para la revegetacioacuten de taludes y en general para corregir los impactos ge-nerados por la construccioacuten de las infraestructuras de transporte dista significativamente del que ca-briacutea seguir en el caso de que se aplicaran los prin-cipios fundamentales de la restauracioacuten ecoloacutegica En la actualidad los proyectos de obra civil utilizan el establecimiento de cubiertas vegetales como ele-mento constructivo para dotar de estabilidad geo-teacutecnica a los taludes generados como resultado de los movimientos de tierra El ser humano lleva maacutes de 9000 antildeos ejecutando movimientos de tierras con fines constructivos (c 9700 en Tell Abu Hureyra Siria) Las teacutecnicas (siembras y plantaciones) y los elementos (variedades de cultivo fertilizantes etc) necesarios para establecer una cubierta vegetal se remontan auacuten maacutes en el tiempo (c 10500 antildeos en

el Creciente Feacutertil) La adaptacioacuten de los principios y teacutecnicas de cultivo a los fines de la obra civil ha sido un largo proceso que en las uacuteltimas deacutecadas ha dado lugar a teacutecnicas tan especiacuteficas como la hidrosiembra (Figura 10) Su desarrollo ha originado maquinaria especiacutefica (hidrosembradoras) y coacutecteles de siembra complejos (mezclas comerciales de se-millas abonos solubles y de liberacioacuten lenta co-poliacutemeros colorantes mulches estabilizantes) que permiten el establecimiento de una cubierta vegetal eficaz contra la erosioacuten en un plazo inferior a un mes aun en superficies de elevada pendiente o di-fiacutecil accesibilidad

Desde finales del siglo pasado los proyectos de obra civil han incorporado la reconstruccioacuten del medio na-tural entre los objetivos perseguidos Dependiendo

del rigor del proyecto esta meta puede confundir-se con la integracioacuten esteacutetica en el paisaje local o puede ambicionar la restauracioacuten de un mosaico de ecosistemas en consonancia con las condiciones del entorno En este segundo caso no se trata de adecuar las teacutecnicas convencionales para obtener un beneficio antildeadido sino que se estaacute planteando un salto cualitativo para el que se requiere una base conceptual diferente aunque no opuesta

Frente a los meacutetodos habituales los principios baacutesi-cos que deberiacutean inspirar los nuevos protocolos son extraordinariamente recientes El concepto de pai-saje como ente singular no como marco tiene me-nos de 500 antildeos el concepto de comunidad vegetal menos de 200 el de evolucioacuten menos de 150 el de sucesioacuten ecoloacutegica menos de 90 A partir de los antildeos ochenta del siglo xx la demanda de instrumentos que permitieran ralentizar la tasa de extincioacuten de es-pecies y recuperar sus haacutebitats condujo a la revisioacuten de las bases fundamentales de la ecologiacutea Aparece con ello una nueva siacutentesis denominada ecologiacutea de la restauracioacuten En el marco de la obra civil la re-visioacuten de los criterios desde esta nueva perspectiva supone pasar de los planteamientos agronoacutemicos a los ecoloacutegicos lo cual se concreta en desplazar el centro de atencioacuten desde los elementos hacia el sistema Esta afirmacioacuten que puede parecer teoacuterica permite distinguir entre aquellos protocolos que a lo sumo favorecen la estabilidad y aquellos otros dise-ntildeados para ademaacutes orientar y catalizar la reconstruc-cioacuten de ecosistemas Aquellos autores de proyectos jefes y directores de obra auditores ambientales responsables de programas de vigilancia ambien-tal teacutecnicos ambientales que cifran la calidad en la seleccioacuten de especies son herederos del plantea-miento agronoacutemico tradicional son especialistas en elementos Esta perspectiva todaviacutea inspira la mayor parte de los proyectos de obra en la actualidad Asiacute se recomienda el aporte de nutrientes el extendido de una gruesa capa de tierra vegetal y la evaluacioacuten del eacutexito de las siembras atendiendo a valores de co-bertura con independencia de las caracteriacutesticas de la matriz circundante no alterada Desde la perspectiva agronoacutemica se ha realizado un esfuerzo por revalori-zar los protocolos convencionales introduciendo nue-vos elementos Asiacute las mezclas de hidrosiembra se enriquecen antildeadiendo un porcentaje de semillas de especies autoacutectonas Estas propuestas adolecen sin embargo de una visioacuten sisteacutemica de la restauracioacuten

En contraste desde una perspectiva centrada en el sistema la calidad de las propuestas y resultados se deberaacute basar en la restitucioacuten de los procesos ecoloacutegicos clave Seguacuten la Sociedad Internacional

para la Restauracioacuten Ecoloacutegica el objetivo es asistir la evolucioacuten del espacio degradado Este eacutenfasis en los procesos es crucial cuando se trata de restaurar ambientes severamente alterados (Whisenant 1999) tales como desmontes o terraplenes de infraestruc-turas lineales Se debe prestar un menor intereacutes a la estructura del ecosistema a recrear (disponibi-lidad de nutrientes y agua presencia de especies dominantes) para dedicar una mayor atencioacuten a los procesos que regulan los flujos de los recursos limi-tantes dentro y a traveacutes de las ceacutelulas del paisaje a recuperar

Los procesos clave son

1 La estabilidad y el control de la erosioacuten

2 La hidrologiacutea

3 El ciclo de los nutrientes

4 La captura y transferencia de la energiacutea

Administraciones ingenieriacuteas y constructoras ten-draacuten que optar ante la dicotomiacutea existente entre mantener los protocolos convencionales ligeramen-te mejorados con por ejemplo la incorporacioacuten de semillas de especies autoacutectonas o con aportes de tierra vegetal de potencia mayor y revisar dichos protocolos desde la oacuteptica de la restauracioacuten ecoloacute-gica esto es de la restitucioacuten de procesos

El principal escollo en el disentildeo de nuevos proto-colos desde la perspectiva de la ecologiacutea de la res-tauracioacuten reside en que se conoce muy poco sobre el funcionamiento de los procesos clave en los talu-des Las comunidades vegetales que se establecen de forma espontaacutenea en los taludes de carretera di-fieren en contra de lo esperado de las catalogadas como lsquocomunidades ruderales o de bordes de cami-nosrsquo Algunos cientiacuteficos han propuesto que aque-llos ecosistemas que presentan una composicioacuten de especies con abundancias relativas que no se ha-biacutean encontrado previamente en un amplio territorio de clima homogeacuteneo sean denominados ecosiste-mas emergentes (Hobbs et al 2006) Ejemplos de ecosistemas emergentes son los bosques tropicales lluviosos sabanizados por la apertura de viacuteas de co-municacioacuten las granjas abandonadas de moluscos y crustaacuteceos en manglares y los matorrales mediterraacute-neos alterados por la contaminacioacuten atmosfeacuterica la invasioacuten de especies exoacuteticas y el sobrepastoreo La novedad de todos estos ecosistemas introduce un elevado grado de incertidumbre sobre cuaacutel deberiacutea ser el ecosistema de referencia que permita orientar

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el horizonte de las actuaciones de restauracioacuten Si las comunidades de desmontes y terraplenes forman parte de ecosistemas emergentes y no pueden iden-tificarse con ninguna de las etapas de las series de vegetacioacuten descritas las comunidades maduras que

habitan en las laderas dejan de ser una referencia vaacutelida De ser este el caso es auacuten maacutes acuciante centrar las actuaciones en la restitucioacuten de procesos maacutes que en aproximar la composicioacuten floriacutestica a la de una determinada comunidad diana

VI SIETE RAZONES PARA LA RESTAURACIOacuteN ECOLOacuteGICA DE AacuteREAS AFECTADAS POR INFRAESTRUCTURAS DE TRANSPORTE

Razoacuten 1 por su extensioacuten

Seguacuten el Anuario 2009 publicado por el Ministerio de Fomento se calcula que la densidad de carreteras en Espantildea es de 0328 kmkm2 (Figura 11 y Tabla 1) Este dato permite estimar la superficie total que ocupan las superficies a restaurar de carreteras en el Estado Analizando los distintos tipos de viacuteas la estimacioacuten asciende a unos 5000 km2 Este valor es notablemente

superior al de otros escenarios en los que desde los antildeos setenta se exige la ejecucioacuten integral de un plan de restauracioacuten como es el caso de las escombreras generadas como consecuencia de actividades extracti-vas Asiacute la superficie estimada ocupada por estos es-cenarios equivale a maacutes de 250 veces la superficie to-tal de la escombrera de la corta de carboacuten de Puentes de Garciacutea Rodriacuteguez en La Coruntildea (800 ha) probable-mente la de mayores dimensiones del Estado espantildeol

Figura 11 Dos indicadores de la red de carreteras espantildeola para las diferentes comunidades autoacutenomas kiloacutemetros de red por kiloacutemetro cuadrado (barras en color gris) y kiloacutemetros de red por cada mil habitantes (barras en color amarillo) Tomado del Anuario estadiacutestico 2009 Ministerio de Fomento

En el aacutembito de la conservacioacuten de la biodiversi-dad esa estimacioacuten de la superficie ocupada por las superficies de carretera a restaurar equivale a 10 veces la extensioacuten de un parque nacional tan emble-maacutetico como Dontildeana (50720 ha) Parece a nuestro juicio una negligencia el limitar el tratamiento de una superficie tan extensa a soluciones estaacutendares alejadas de los rigurosos criterios de la restauracioacuten ecoloacutegica como herramienta para la conservacioacuten

de la diversidad bioloacutegica Hasta el presente estos criterios se han aplicado en todo caso a la inte-gracioacuten paisajiacutestica de espacios generados tras la eliminacioacuten de infraestructuras abandonadas Las razones expuestas maacutes abajo en lo referente a su geometriacutea singularidad e integracioacuten en el funcio-namiento ecoloacutegico del mosaico de ecosistemas jus-tifican a nuestro juicio que se reconsidere y revise esta praacutectica

Tabla 1 Red de carreteras del Estado Comunidades Autoacutenomas y Diputaciones y Cabildos seguacuten su tipologiacutea()

ANtildeOSRED

NACIONAL TOTAL

TOTALVIacuteAS DE GRAN

CAPACIDAD

AUTOPISTAS DE PEAJE

AUTOVIacuteASCARRETERAS DE DOBLE CALZADA

RESTO DE LA RED

OTRAS CARRETERAS

1970 139212 203 82 121 - 139009 -

1980 149576 1933 1530 403 - 147643 -

1985(1) 153253 2925 1798 498 629 150328 168470

1990 156243 5624 1887 2806 931 150619 168470

1994(2) 162169 7748 2023 4474 1251 154448 168470

2000 163557 10443 2202 6847 1394 153114 168470

2008(2) 165008 15105 2997 10521 1587 149903 168470

2009(p) 165463 15621 3016 11005 1599 149843 168470

Datos obtenidos del Anuario Estadiacutestico 2009 Ministerio de Fomento Fuente DG de Carreteras (Ministerio de Fomento) comunidades autoacutenomas y diputaciones () Ademaacutes de este viario los ayuntamientos (dato 1998) tiene 489698 km de los cuales 361517 km son interurbanos y ademaacutes existen 11355 (dato 1998) de viario de otros organismos (1) A partir de 1985 aparece la tipologiacutea de carreteras de doble calzada y se hacen homogeacuteneas las series teniendo en cuenta esta clase de carreteras Ademaacutes se incluyen otras carreteras o caminos vecinales a cargo de los ayuntamientos ICONA IRYDA Ministerio de De-fensa organismos autoacutenomos y otros organismos (2) Se elabora en este antildeo un nuevo inventario en la red de carreteras del Estado (p) Datos provisionales

Razoacuten 2 por su geometriacutea

A pesar de su vasta extensioacuten el aprovechamiento po-tencial de este espacio viene draacutesticamente condicio-nado por su geometriacutea en estrechas franjas a ambos lados de la viacutea El desarrollo de la Ecologiacutea del Paisaje en su acepcioacuten anglosajona (Forman y Godron 1986) y del anaacutelisis de las repercusiones de la fragmentacioacuten de haacutebitats evidencia las limitaciones de la geometriacutea de los taludes de carretera para acoger ecosistemas maduros o complejos dado que se trata de espacios marginales sometidos a un intenso efecto borde En

este contexto el efecto borde se define como la per-meabilidad a los impactos causados por la proximidad de la viacutea La penetracioacuten de este efecto es diferente para cada especie y para cada haacutebitat (Tabla 2) Este fenoacutemeno debe reflejarse tanto en las propuestas de restauracioacuten ecoloacutegica como en el espacio disponible para su ejecucioacuten La normativa deslinda desde la Ley 251988 de Carreteras y Caminos tres zonas anidadas de influencia de la viacutea la de dominio puacuteblico de ser-vidumbre y de afeccioacuten En autopistas autoviacuteas y viacuteas raacutepidas la zona de dominio puacuteblico se extiende hasta 8 m desde la arista exterior de la explanacioacuten (es decir

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desde la interseccioacuten del talud con el terreno original adyacente) La zona de servidumbre se extiende 25 m desde el mismo eje y la de afeccioacuten alcanza los 100 m La Ley andaluza 82001 probablemente la norma de carreteras maacutes avanzada en materia ambiental delimi-ta el espacio en el que deben ejecutarse las medidas y proyectos de integracioacuten ambiental y restauracioacuten pai-sajiacutestica Asiacute dentro de la zona de servidumbre legal el uso de los terrenos por sus propietarios o titulares estaacuten supeditados a su compatibilidad con la integra-cioacuten ambiental y paisajiacutestica de la carretera Asimismo las medidas de integracioacuten ambiental o restauracioacuten del paisaje podraacuten ocupar las zonas de afeccioacuten que incluso podraacuten ampliarse maacutes allaacute de los 100 m desde

la explanacioacuten si existen razones ambientales que lo justifiquen a juicio de la Administracioacuten

En conclusioacuten los taludes son espacios afectados por la existencia y funcionamiento de la viacutea pero la publicacioacuten de normas tan avanzadas como la andaluza permite disentildear y ejecutar protocolos de restauracioacuten ecoloacutegica en un espacio que no solo no se circunscribe al de la explanacioacuten sino que puede ocupar toda la superficie que se considere oportuna por su vinculacioacuten desde un punto de vista ecoloacutegico lo cual abre la puerta a que se pueda proyectar algo maacutes ambicioso que el simple maquillaje verde

mediterraacuteneo (Figura 12) Cabe destacar que tambieacuten hay una importante representacioacuten de especies exoacute-ticas (introducidas procedentes de otros territorios aloacutectonas) e incluso un 3 de endemismos

Elemento aloacutectono

Elemento cosmopolita y subcosmopolita

Elemento eurosiberiano-atlaacutentico-mediterraacuteneo

Elemento endeacutemico ibeacuterico

Elemento mediterraacuteneo

Figura 12 Representacioacuten graacutefica del porcentaje de taxones perte-neciente a cada uno de los distintos elementos coroloacutegicos identifi-cados en la flora de los taludes madrilentildeos Fuente Loacutepez Jimeacutenez N 2004 VII Congreso Nacional de Medio Ambiente

Algunas de las comunidades vegetales descritas o reconocidas en taludes de carretera tambieacuten se en-cuentran en otras localizaciones taludes artificiales creados en la construccioacuten de otras infraestructuras o edificaciones paisajes agriacutecolas espacios natura-les protegidos Sin embargo tambieacuten se han descrito comunidades vegetales que alcanzan su mayor rique-za y complejidad en taludes de carretera y rara vez se encuentran en otros enclaves (Schaffers y Sy cora 2002) La singularidad de las comunidades vegetales en estos enclaves viene dada por tres contingentes

Figura 13 En la obra Las amapolas de Claude Monet (1873) ya se aprecia una mayor frecuencia de estas plantas en el terrapleacuten que en los campos de labor

Especies exoacuteticas La frecuencia de estas especies en las comunidades de taludes de carretera es ma-yor que en otras formaciones comparables alejadas de la viacutea (Hansen y Clevenger 2005)

1 Especies nativas arvenses y de pastizales El aban-dono de las teacutecnicas tradicionales de cultivo y de ganaderiacutea extensiva el uso de herbicidas la peacuterdida de tierras agriacutecolas son las causas prin-cipales de la desaparicioacuten progresiva de especies arvenses ruderales y de pastizales que hasta hace poco tiempo eran muy comunes (Figura 13) Los taludes de carreteras pueden actuar como refugio (Tikka et al 2000) e incluso como corredores que favorezcan su propagacioacuten y contribuyan a reducir su riesgo de extincioacuten (Tikka et al 2001)

2 Especies que toleran el reacutegimen de perturbaciones En cualquier ecosistema la presencia de un deter-minado mosaico de comunidades de organismos viene determinado por el reacutegimen de perturbacio-nes (fuegos inundaciones etc) En los taludes de carretera ese reacutegimen viene definido por las ope-raciones de mantenimiento de la viacutea (vertido de tierras procedentes de la limpieza de cunetas sie-gas podas etc) En consecuencia las operaciones de mantenimiento determinan tanto la vegetacioacuten como la fauna de los taludes Asiacute entre las espe-cies lentildeosas las operaciones de limpieza mecaacutenica (gradeo o fresado) parecen estar seleccionando a las especies rebrotadoras frente a las que carecen de esta cualidad (Spooner 2005) Es sabido que las labores de siega alteran la frecuencia con la que aparecen en estos medios distintos mamiacuteferos de pequentildeo porte (Meunier et al 1999)

Este efecto modelador de las operaciones de manteni-miento podriacutea aprovecharse con el fin de potenciar el papel de los taludes como refugio y corredor para el desplazamiento de especies vegetales e incluso como sumidero de las emisiones de dioacutexido de carbono

3 Especies nativas en entornos transformados La agricultura intensiva y la urbanizacioacuten han relega-do a la flora espontaacutenea local a los taludes de carretera convirtieacutendose estos en la mejor repre-sentacioacuten de las especies y comunidades autoacutecto-nas cuando no en el uacuteltimo reducto (Figura 14) La conservacioacuten de las franjas de vegetacioacuten nativa en las maacutergenes de las viacuteas de transporte se ha reclamado incluso en marcos tan emblemaacuteticos como la Amazoniacutea brasilentildea territorio en el que la subvencioacuten de la expansioacuten de las tierras agriacutecolas ha conducido a que se pongan en cultivo incluso los taludes de carretera (Allen 1997)

Tabla 2 Efectos de la penetracioacuten de efecto de borde de las carreteras asfaltadas en diferentes grupos de mamiacuteferos y aves

GRUPO HAacuteBITAT ALCANCE DEL EFECTO (M)

Ungulados Bosque 90-200

Osos Bosque 2500 (con traacutefico)

Osos Bosque 740 (sin traacutefico)

Linces Bosque 100

Lobos Bosque 2000

Insectiacutevoros Bosque 800

Limiacutecolas Prados 2000 (traacutefico denso)

Limiacutecolas Prados 625 (poco traacutefico)

Varias especies de aves Prados 810

Varias especies de aves Bosque 100-680

Varias especies de aves Cultivos 300

Fuente Elaborado a partir de Delgado JD 2003

Razoacuten 3 por su singularidad

En botaacutenica se ha acuntildeado el teacutermino de vegetacioacuten ruderal o viaria para reunir a aquellas comunidades vegetales propias de bordes de caminos sometidas a constantes perturbaciones entre ellas el pisoteo de los transeuacutentes Se trata de comunidades forma-das por especies cosmopolitas es decir de amplia distribucioacuten en el planeta Sin embargo no es este el perfil de la flora que se encuentra en los taludes

de carretera En un territorio floriacutesticamente pobre como el Reino Unido el 435 de las especies apa-recen representadas en los taludes (Way 1977) En la Comunidad de Madrid caracterizada por una ele-vada riqueza de especies vegetales un estudio de-tallado de la flora de los taludes (Loacutepez Jimeacutenez et al 2004) observaba que nada menos que el 14 de los taxones de este territorio aparece represen-tado en ellos es decir 385 de 2684 siendo el con-tingente maacutes numeroso no el cosmopolita sino el

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IacuteNDICE

ESPECIES INVASORAS

Debido a la severidad de las alteraciones los es-pacios afectados por movimientos de tierras son susceptibles de ser colonizados por especies in-vasoras Se muestran seis ejemplos de especies catalogadas como invasoras (Sanz Elorza et al 2004) que han sido detectadas en taludes de ca-rretera De izquierda a derecha y de arriba abajo coniza del Canadaacute (Conyza canadensis) hierba del asno (Oenothera glazioviana) aacuterbol del cielo

(Ailanthus altissima) aquilea amarilla (Achillea fi-lipendulina) amapola de California (Eschscholzia californica) y chumbera (Opuntia maxima) Autor Ignacio Mola

Sanz Elorza M Dana Saacutenchez ED amp Sobrino Ves-perinas E eds 2004 Atlas de las Plantas Aloacutectonas Invasoras en Espantildea Direccioacuten General para la Bio-diversidad Madrid 384 pp

GEacuteNERO CENTAUREA

Las centauras son un geacutenero de plantas (Cen-taurea) que bien sirven de ejemplo de la elevada diversidad floriacutestica existente en los taludes de carretera Se muestran en la laacutemina seis ejem-plos de especies de este geacutenero que se pueden encontrar en estos medios en diferentes puntos

de la Peniacutensula Ibeacuterica De izquierda a derecha y de arriba abajo centaura (Centaurea seridis) rompe piedras (C aspera) abrepuntildeos (C calci-trapa) garbanzos del cura (C alba) clavel de San Juan (C cyanus) y arzolla (C ornata) Autor Ignacio Mola

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Figura 14 En vastas extensiones del Estado australiano de Victoria la vegetacioacuten espontaacutenea autoacutectona solo se conserva en las riberas de los riacuteos y en los taludes de infraestructuras lineales como consecuencia de la ocupacioacuten del territorio por la agricultura En la imagen puede apreciarse la banda de vegetacioacuten espontaacutenea en las maacutergenes de la carretera en una matriz de campos arados

Razoacuten 4 por su interaccioacuten con el entorno

La interaccioacuten ecoloacutegica de los taludes de las viacuteas de transporte con su entorno inmediato deriva de su condicioacuten de corredores Es decir por su geometriacutea canalizan flujos longitudinales y constituyen barreras para flujos transversales Sus dimensiones ademaacutes les fuerzan a atravesar una amplia representacioacuten de ecosistemas Si bien todas las interacciones son po-tencialmente relevantes es evidente que estos efec-tos son particularmente notables cuando el trazado de la viacutea atraviesa espacios naturales de intereacutes o particularmente sensibles

1 Conectividad La conectividad de las viacuteas de co-municacioacuten con su entorno tiene dos importan-tes efectos que son antagoacutenicos y ocurren de forma simultaacutenea el efecto barrera y el efecto conector

Efecto barrera Las viacuteas de comunicacioacuten como ba-rreras fragmentan poblaciones tanto de animales como de vegetales La construccioacuten de pasos de fauna pretende evitar la irrupcioacuten de animales en las calzadas y facilitar el que puedan franquear el obstaacuteculo que representa la viacutea La restauracioacuten ecoloacutegica en el entorno de la viacutea puede contribuir

a mejorar la eficiencia de estos pasos El concurso de la restauracioacuten ecoloacutegica es especialmente re-levante en el caso de los grandes pasos superio-res con tipologiacutea constructiva de falso tuacutenel desti-nados a ungulados y carniacutevoros conocidos como ecoductos o conectores de paisaje La eficiencia de estos ecoductos depende ademaacutes de sus di-mensiones y ubicacioacuten del eacutexito en la ocultacioacuten de la viacutea y en la recreacioacuten del paisaje a lo largo del recorrido de estos pasos de fauna

Frente a este efecto barrera negativo los talu-des de carretera podriacutean ejercer un efecto ba-rrera positivo cuando el objetivo es apantallar las emisiones procedentes del traacutefico rodado Fundamentalmente ruidos y contaminantes En el caso de los ruidos es sabido que la eficacia como aislante acuacutestico de una cubierta vegetal de reducido porte es muy deficiente Sin embar-go puede desempentildear un papel relevante como filtro de partiacuteculas de emisiones de gases con-taminantes como oacutexidos de nitroacutegeno e incluso como sumidero de dioacutexido de carbono (Forman et al 2003) La capacidad de la actividad vegetal en el entorno de la viacutea como sumidero de CO

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depende del aprovechamiento que se le deacute a los restos vegetales cosechados

Efecto conector Los taludes tambieacuten pueden funcionar como conectores contribuyendo a aminorar los efectos de la fragmentacioacuten de haacute-bitats y poblaciones Con frecuencia se ha asu-mido que las maacutergenes de carretera mantienen poblaciones de especies vegetales forestales solo como consecuencia de la colonizacioacuten rei-terada de individuos procedentes de fragmentos de bosque conservados en el entorno sin que puedan completarse los ciclos vitales de estas especies en los taludes debido al marcado efec-to borde y al draacutestico reacutegimen de perturbacio-nes en este medio Sin embargo algunos auto-res sostienen que los taludes pueden funcionar como haacutebitats estables e incluso como corredo-res que permitan conectar fragmentos alejados de formaciones vegetales aisladas en el seno de matrices transformadas por la agricultura y la urbanizacioacuten (Deckers et al 2005) Pequentildeos nuacutecleos poblacionales de especies vegetales amenazadas podriacutean actuar como conectores a modo de lsquocadena de trampolinesrsquo (conocidos en ingleacutes como stepping stones) que propicia-ran la propagacioacuten de frutos semillas polen esporas polinizadores dispersores de frutos manteniendo la funcionalidad del conjunto de fragmentos es decir de la metapoblacioacuten El hecho de que los taludes pudieran cumplir este papel de conectores no es trivial En caso de que estos corredores fueran eficaces podriacutean tener un papel en la conservacioacuten de especies en el marco del cambio climaacutetico al ofrecer viacuteas de migracioacuten reduciendo el riesgo de extincioacuten de los taxones sensibles (Tikka et al 2001) Sin embargo para cumplir estos objetivos es pre-ciso revisar y adecuar las praacutecticas actuales de mantenimiento y limpieza de los espacios ane-jos a la viacutea

2 Propagacioacuten de invasiones bioloacutegicas Es un he-cho indiscutible que de entre todas las especies animales y vegetales introducidas procedentes de territorios geograacuteficamente alejados el 1permil altera draacutesticamente el funcionamiento ecoloacutegico de los territorios invadidos con efectos no de-seados en la economiacutea local en la forma de vida en los asentamientos humanos afectados y en la conservacioacuten del patrimonio natural Tal como se

ha destacado en el epiacutegrafe anterior los taludes de carretera son enclaves enriquecidos en espe-cies exoacuteticas que dada su geometriacutea podriacutean propiciar su propagacioacuten

En Espantildea este fenoacutemeno se ha visto agravado tanto por el desconocimiento de este fenoacutemeno por parte de los responsables del disentildeo ejecu-cioacuten y gestioacuten de las infraestructuras (Figura 15) como por el divorcio en los proyectos de obra entre los objetivos de integracioacuten ambiental y de acondicionamiento esteacutetico A la hora de estimar el riesgo debe tenerse en cuenta que tanto la frecuencia de invasiones como su propagacioacuten a lo largo de la viacutea se ve favorecida por la dispo-nibilidad de recursos (agua y nutrientes) por lo que seraacute mayor en la Espantildea atlaacutentica que en la mediterraacutenea

Figura 15 Manuales teacutecnicos publicados por la Administracioacuten es-pantildeola (Ruiz de la Torre 1990) recomiendan expresamente el uso del ailanto en proyectos de obra civil a pesar de que esta especie estaacute considerada como uno de los invasores maacutes agresivos en la cuenca del Mediterraacuteneo En la imagen los ejemplares de ailanto no son plantados sino que se propagan espontaacuteneamente por los taludes de la Ciudad Universitaria de Madrid

Razoacuten 5 por su potencial para promover valores naturales culturales y educativos

Actualmente los objetivos que se persiguen en los proyectos de revegetacioacuten de taludes de carretera son cuatro 1) estabilizacioacuten geoteacutecnica de los taludes y control de la erosioacuten 2) integracioacuten visual en el pai-saje 3) adecuacioacuten esteacutetica y 4) seguridad vial

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iquestES LA RESTAURACIOacuteN DE TALUDES DE LA RED VIARIA UN EJERCICIO DE JARDINERIacuteA O DE CONSERVACIOacuteN DEL PATRIMONIO NATURAL

La integracioacuten paisajiacutestica frecuentemente es el objetivo principal de la restauracioacuten de la cubierta vegetal en espacios afectados por obras civiles La eficacia de esta funcioacuten en amplias extensio-nes de la Peniacutensula Ibeacuterica es cuestionable de-bido a la profunda transformacioacuten antroacutepica del paisaje en la Cuenca del Mediterraacuteneo A lo largo de vastas extensiones los taludes de carreteras y viacuteas del ferrocarril deberiacutean ser sembrados con cereales abandonados o simplemente asfaltados si lo que se pretende es su convergencia con el

paisaje circundante La falta de un referente in-mediato de cubierta vegetal silvestre atribuiriacutea a la restauracioacuten una funcioacuten puramente esteacutetica siendo sus protocolos teacutecnicos un ejercicio de ajardinamiento

La escasa ambicioacuten de este planteamiento con-trasta con la estrategia adoptada en paiacuteses como Australia En las zonas mas pobladas del paiacutes el paisaje es una sucesioacuten de explotaciones agriacutecolas sin solucioacuten de continuidad las maacutergenes de las principales carreteras son los uacutenicos reductos en los que se mantiene la vegetacioacuten autoacutectona Las bandas de vegetacioacuten de entre 10 y 200 m a los lados de estas viacuteas constituyen una enorme red cuya extensioacuten solo en el estado de Victoria supera los 5500 km2 El reconocimiento del valor ecoloacutegi-co de este entramado de corredores ha conducido a su denominacioacuten como reservas (road reserves) Su gestioacuten compete a las administraciones respon-sables del transporte y del medio ambiente aseso-radas por comiteacutes cientiacuteficos

Estos objetivos no contemplan ni la singularidad de las comunidades de organismos asociados a la viacutea ni el valor de los taludes por su interaccioacuten ecoloacutegica con el entorno Las reflexiones presentadas en los cuatro epiacutegrafes anteriores sugieren que el nivel de ambicioacuten de las propuestas puede ser muy superior Ese salto cualitativo estariacutea vinculado a la incorporacioacuten de cri-terios ecoloacutegicos en la transformacioacuten del territorio El disentildeo ejecucioacuten y gestioacuten del acondicionamiento de los taludes de las infraestructuras de transporte podriacutea llegar a perseguir tanto la conservacioacuten de la biodiversidad como la educacioacuten ambiental

Conservacioacuten de la biodiversidad Los objetivos par-ticulares en el entorno de la infraestructura seriacutean los siguientes

bull Asegurar la calidad de las aguas y el control de la erosioacuten en el entorno de la viacutea

bull Proteger y favorecer los restos conservados de vegetacioacuten nativa

bull Identificar y proteger las especies amenaza-das de flora y fauna

bull Ubicar en funcioacuten del entorno y acondicionar los taludes como corredores para el desplaza-miento de la flora y fauna nativa

bull Acondicionar los taludes como haacutebitats para la vida silvestre preservando los recursos ne-cesarios para el desarrollo de las comunida-des de microorganismos vegetales de aves reptiles mamiacuteferos etc

bull Restablecer la vegetacioacuten nativa mediante protocolos que propicien la regeneracioacuten na-tural o mediante restauracioacuten activa

bull Identificar restaurar y proteger las riberas y humedales en el entorno de la viacutea

bull Asegurar la conservacioacuten del banco de diaacutes-poras y formas de resistencia

bull Controlar la colonizacioacuten y propagacioacuten de es-pecies invasoras y de otras plagas o agentes patoacutegenos

bull Regular el uso de los taludes por herbiacutevoros

bull Regular quemas controladas y evitar riesgos de incendio

bull Promover cubiertas vegetales que amortiguumlen las emisiones de contaminantes procedentes de la viacutea

bull Promover la capacidad de los taludes como sumideros de CO

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Educacioacuten ambiental El objetivo general es divulgar los valores del patrimonio natural local a traveacutes de la identificacioacuten y reconstruccioacuten de paisajes repre-sentativos Como objetivos particulares incluye

bull Mantener y restaurar el atractivo visual del paisaje en el entorno de la viacutea

bull Identificar y proteger paisajes y enclaves con valor cultural o histoacuterico

bull Regular el uso recreativo de la viacutea y su entorno

Razoacuten 6 por imperativo legal o exigencia normativa

La Directiva comunitaria 85337CEE considera entre otros aspectos que los efectos de un proyecto sobre el medio ambiente deben evaluarse para proteger la salud humana contribuir mediante un mejor entorno a la calidad de vida velar por el mantenimiento de la diversidad de especies y para conservar la ca-pacidad de reproduccioacuten del sistema como recurso fundamental de la vida La incorporacioacuten en Espa-ntildea de esta Directiva 85337CEE al Derecho interno estatal se efectuoacute mediante el RDL 13021986 que experimentoacute sucesivas modificaciones y el Regla-mento que lo desarrolla el RD 11311988 Con pos-terioridad el RDL 12008 por el que se aproboacute el texto refundido de Ley de Evaluacioacuten de Impacto Ambiental de proyectos derogaba el RDL 13021986 y sus modificaciones y finalmente el RDL 12008 ha sido a su vez modificado por la reciente Ley 62010 Simultaacuteneamente la Directiva 85337CEE ha sido modificada por las Directivas 9711CE y 200335CE

En la actualidad praacutecticamente la totalidad de los proyectos de infraestructuras de transporte puacuteblicos

y privados que correspondan a autopistas y auto-viacuteas viacuteas raacutepidas y carreteras convencionales de nuevo trazado modificacioacuten del trazado o duplica-ciones de calzada de otras existentes en una longi-tud continuada de maacutes de 10 km y las liacuteneas de fe-rrocarril para traacutefico de largo recorrido deben some-terse a evaluacioacuten de impacto ambiental en la forma prevista en la Ley Mientras que la obligatoriedad de someter a evaluacioacuten de impacto ambiental el resto de carreteras y liacuteneas ferroviarias que quedan fuera del aacutembito competencial del Estado y no reuacutenan las anteriores caracteriacutesticas se determina en las corres-pondientes normativas autonoacutemicas

De modo general el proyecto para el tratamiento de los espacios afectados por las obras se articula en torno a los potenciales impactos ambientales Desde los Reales Decretos 13021986 y 11311988 se esta-blece que los estudios de impacto ambiental deben proponer las actuaciones necesarias para evitar re-ducir o compensar los efectos ambientales negativos significativos Estas acciones reciben el nombre de medidas protectoras (o preventivas) correctoras y compensatorias respectivamente La legislacioacuten baacute-sica de evaluacioacuten de impacto ambiental de proyec-tos sumada a sus homoacutelogas autonoacutemicas extien-de el dominio de aplicacioacuten de estas definiciones al aacutembito de las infraestructuras lineales que desde el punto de vista de la ecologiacutea de la restauracioacuten en el antildeo 1998 se definiacutea como un gigante dormido por Forman y Alexander gigante por la extensioacuten de superficie afectada y la trascendencia de la adopcioacuten de criterios ecoloacutegicos y dormido por la exigua re-percusioacuten de sus planteamientos aseveraciones por fortuna difiacuteciles de mantener en la actualidad

Razoacuten 7 por una nueva visioacuten en la construccioacuten de infraestructuras

Dos iniciativas una puacuteblica y otra privada plantean en la actualidad la revisioacuten de los criterios que se vienen empleando en la integracioacuten ambiental de las infraestructuras de transporte De una parte la elaboracioacuten del Plan Estrateacutegico de Infraestructuras y Transporte (PEIT) con el objetivo de proponer las medidas que puedan contribuir a mejorar la compe-titividad econoacutemica la cohesioacuten territorial y social y la seguridad y calidad del servicio desde los prin-cipios de racionalidad y eficiencia en el uso de los recursos (httppeitcedexes) Entre las recomenda-ciones del Informe de Sostenibilidad Ambiental del PEIT elaborado en enero de 2005 se planteaba la mejora de los procedimientos y las praacutecticas de eva-luacioacuten ambiental a todos los niveles de decisioacuten el

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incremento de la inversioacuten en seguimiento y control ambiental de todos los elementos del sistema de transporte y de forma destacable la mejora del co-nocimiento faacutectico de las relaciones entre el medio ambiente el territorio y el sistema de transporte a las diversas escalas que requiere el proceso de pla-nificacioacuten del transporte apoyar la I+D+i en tecno-logiacuteas de disminucioacuten del impacto ambiental de las infraestructuras y de los equipos del transporte

Para la consecucioacuten de estos objetivos el PEIT se plantea una inversioacuten de 248892 millones de euros y el horizonte temporal del 2020 al que se llegaraacute tras atravesar tres fases de desarrollo En la actuali-dad se ha completado la primera fase (2005-2008) en la que se persigue establecer las bases del cam-bio para el disentildeo de alternativas teacutecnicas que mejo-ren el comportamiento ambiental del sector

La segunda iniciativa que plantea una revisioacuten de los criterios con los que se viene disentildeando y ejecutan-do la construccioacuten de infraestructuras de transporte es la creacioacuten y puesta en marcha de la Plataforma Tecnoloacutegica de la Construccioacuten bajo el lema lsquoHacia el 2030 Innovacioacuten y cambio eficiente del Sector de la Construccioacutenrsquo Esta Plataforma pretende actuar sobre el nivel tecnoloacutegico del sector en Espantildea y persigue la mejora de la eficiencia de la productividad y de la seguridad asiacute como la disminucioacuten del impacto en el medio ambiente que el sector tiene actualmente Para ello la Plataforma estaacute formada por representantes de todos los agentes del sector de la construccioacuten en Espantildea Para minimizar los impactos ambientales esta Visioacuten 2030 se plantea como reto alcanzable a corto plazo la reduccioacuten significativa de las aacutereas afectadas por los trabajos y la revegetacioacuten de es-pacios degradados empleando especies autoacutectonas

VII ESTRUCTURA Y OBJETIVOS DEL LIBRO

El libro que el lector tiene en sus manos resume el conocimiento de un variado nuacutemero de especialistas que se interesan por la atenuacioacuten de los impactos y por la restauracioacuten ecoloacutegica de las aacutereas afecta-das por infraestructuras lineales El libro repasa la informacioacuten disponible para aspectos geomorfoloacute-gicos hidroloacutegicos edafoloacutegicos botaacutenicos fauniacutes-ticos ecoloacutegicos y tecnoloacutegicos los complementa con la realidad y la necesidad de los programas de seguimiento y vigilancia ambiental y nos recuerda lo que la legislacioacuten vigente especifica sobre impac-tos correcciones y restauraciones Pero el libro no se queda ahiacute ya que pretende anticipar los cambios de paradigma que se vislumbran en cada disciplina y aportar sugerencias concretas para modernizar la aproximacioacuten al problema ambiental generado con la creacioacuten de estas infraestructuras

En los capiacutetulos centrales del libro el lector no encontraraacute recetas concretas a seguir pero si los principios que pueden dar lugar a estas recetas

especiacuteficas para cada caso Se repasan los errores frecuentes y las ensentildeanzas que de ellos se pueden extraer y se describen casos exitosos que pueden servir de referencia El lector encontraraacute tambieacuten fuentes adicionales de informacioacuten tanto trabajos cientiacuteficos como fuentes documentales diversas y bases de datos en internet El libro pretende ser uacutetil para todos aquellos que trabajen en proyectos de infraestructuras de transporte o tengan intereacutes por la aplicacioacuten de los principios de la restaura-cioacuten ecoloacutegica a unos ecosistemas cada vez mas importantes Pero tambieacuten busca desafiar los pa-radigmas actuales y la normativa vigente abriendo temas que necesariamente deberaacuten ser abordados con mas profundidad en un futuro a medida que sepamos maacutes sobre estos ecosistemas nuevos emergentes que surgen tras la construccioacuten de es-tas omnipresentes infraestructuras y a medida que la sociedad en su conjunto vaya demandando un enfoque ambientalmente maacutes exigente de las acti-vidades humanas

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BOE 1988 Ley 251988 de 29 de julio de Carreteras Jefatura del Estado Boletiacuten Oficial del Estado nordm 182 del saacutebado 30 de julio de 1988 23514-23524 httpwwwboeesboedias19880730pdfsA23514-23524pdf

BOE 1988 Real Decreto 11311988 de 30 de septiem-bre por el que se aprueba el Reglamento para la ejecucioacuten de Real Decreto Legislativo 13021986 de 28 de junio de Evaluacioacuten de Impacto Ambiental Bo-letiacuten Oficial del Estado nordm 239 del mieacutercoles 5 de oc-tubre de 1988 28911-28916 httpwwwboeesboedias19881005pdfsA28911-28916pdf

BOE 2008 Real Decreto Legislativo 12008 de 11 de enero por el que se aprueba el texto refundido de la Ley de Evaluacioacuten de Impacto Ambiental de pro-yectos Boletiacuten Oficial del Estado nordm 23 del saacutebado 26 enero 2008 4986-5000 httpwwwboeesboedias20080126pdfsA04986-05000pdf

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DO 1985 Directiva 85337CEE del Consejo de 27 de junio de 1985 relativa a la evaluacioacuten de las repercu-siones de determinados proyectos puacuteblicos y privados sobre el medio ambiente DO L 175 de 571985 p 4048 httpeur-lexeuropaeuLexUriServLexUriServdouri=CELEX31985L0337ESHTML

DO 1997 Directiva 9711CE del Consejo de 3 de marzo de 1997 por la que se modifica la Directiva 85337CEE relativa a la evaluacioacuten de las repercusiones de deter-minados proyectos puacuteblicos y privados sobre el medio ambiente DO L 73 de 1431997 p 515 httpeur-lexeuropaeuLexUriServLexUriServdouri=CELEX31997L0011ESHTML

DO 2003 Directiva 200335CE del Parlamento Euro-peo y del Consejo de 26 de mayo de 2003 por la que se establecen medidas para la participacioacuten del puacuteblico en la elaboracioacuten de determinados planes y programas relacionados con el medio ambiente y por la que se modifican en lo que se refiere a la participacioacuten del puacuteblico y el acceso a la justicia las Directivas 85337CEE y 9661CE del Consejo-Declaracioacuten de la Comisioacuten DO L 156 de 2562003 p 1725 httpeur-lexeuropaeuLexUriServLexUriServdouri=OJL200315600170024ESPDF

Notas sobre legislacioacuten

La Directiva comunitaria 85337CEE de junio de 1985 consideraba entre otros aspectos que los efectos de un proyecto sobre el medio ambiente deben evaluarse para proteger la salud humana contribuir mediante un mejor entorno a la calidad de vida velar por el mante-nimiento de la diversidad de especies y para conservar la capacidad de reproduccioacuten del sistema como recurso fundamental de la vida

La incorporacioacuten en Espantildea de esta Directiva 85337CEE al Derecho interno estatal se efectuoacute mediante norma con rango de Ley al aprobarse el Real Decreto Legislativo 13021986 Por su parte las comunidades autoacutenomas de acuerdo con las competencias que les reconocen los respectivos estatutos de autonomiacutea han desarrollado la normativa baacutesica de evaluacioacuten de im-pacto ambiental

Con posterioridad la Directiva 9711CE del Consejo ampliacutea esta obligacioacuten a la construccioacuten de nuevas ca-rreteras de cuatro carriles o maacutes o realineamiento yo ensanche de una carretera existente de dos carriles o menos con objeto de conseguir cuatro carriles o maacutes cuando tal nueva carretera o el tramo de carretera rea-lineado yo ensanchado alcance o supere los 10 km en una longitud continua

PLANTAS DE TALUDES

Los espacios que circundan las carre-teras son considerados en la actua-lidad terrenos marginales Curiosa-mente prosperan numerosas espe-cies vegetales de indudable belleza como las que se muestran a conti-nuacioacuten De arriba abajo cebolla de culebra (Asphodelus fistulosus) lechetrezna (Euphorbia helioscopia) y clavel de asno (Agrosthemma gi-thago) Autor Ignacio Mola

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2Consideraciones geomorfoloacutegicas e hidroloacutegicas

Joseacute F Martiacuten Duque Saturnino de Alba y Fernando Barbero Abolafio

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se puede llegar a la misma conclusioacuten que para Es-tados Unidos

Estas reflexiones parecen estar fuera del aacutembito de las ciencias geoloacutegicas y geomorfoloacutegicas de modo que mover tierras para construir una infraestructura lineal o el asfaltado de carreteras no se consideran temas o procesos centrales de esas ciencias Sin em-bargo las cifras aportadas muestran escenarios en los que las actividades humanas se han convertido en el principal agente geomorfoloacutegico que actual-mente modifica la superficie terrestre Entre ellas la construccioacuten de infraestructuras lineales es una de las maacutes importantes Por todo ello la transforma-cioacuten de la superficie terrestre debida a esta actividad constructiva deberiacutea estar entre la corriente domi-nante de los trabajos geoloacutegicos y geomorfoloacutegicos actuales

Respecto a superficies afectadas Hooke et al (2010) utilizando datos de todos los paiacuteses que cuentan con informacioacuten disponible a este respecto han es-timado que alrededor de 06 millones de kiloacutemetros cuadrados de la superficie terrestre estaacuten ocupados por infraestructuras lineales en zonas rurales (exclui-da su ocupacioacuten en aacutereas urbanas que computariacutea como superficies urbanas) Todo ello supone una ocupacioacuten de aproximadamente un 05 de la su-perficie terrestre continental libre de hielos

En paiacuteses desarrollados este porcentaje se situacutea en torno al 1 Forman y Alexander (1998) y Forman (2000) sostienen que los corredores de carreteras cubririacutean aproximadamente el 1 de Estados Uni-dos citando para ello datos del National Research Council (1997 p 181) Por su parte Luis Balaguer (com pers) utilizando datos oficiales del Ministe-rio de Fomento tambieacuten ha estimado que maacutes de 5000 km2 (lo que equivale a un 1 de la superficie de nuestro paiacutes o a 10 veces el tamantildeo del Parque Nacional de Dontildeana) estaacuten cubiertos por autoviacuteas autopistas o carreteras

El aacuterea total ocupada por infraestructuras lineales de transporte (el 05 de la superficie continental libre de hielos alrededor del 1 en paiacuteses desa-rrollados) puede parecer pequentildea Sin embargo los efectos ambientales de estas superficies alteradas son mucho mayores de lo que podriacutean sugerir esas cifras Asiacute Forman y Alexander (1998) estiman que entre el 15 y el 20 de la superficie de los Estados Unidos estaacute ecoloacutegicamente afectada por carreteras considerando todos los impactos que estas ocasio-nan fragmentacioacuten de haacutebitats emisioacuten de agentes contaminantes escorrentiacutea y sedimentos que causan

efectos adversos en amplias superficies terrestres y acuaacuteticas entre otros

Como es faacutecil de comprender lo maacutes probable es que todas estas cifras se incrementen en un futuro en un escenario en el que se mantiene el crecimiento imparable de la poblacioacuten mundial y el desarrollo econoacutemico de los paiacuteses emergentes Por consi-guiente se ejerceraacute una importante presioacuten cons-tructiva sobre muchos territorios visible ya en de-terminados aacutembitos (Figura 1) Todo ello refuerza la enorme importancia que tiene la integracioacuten ambien-tal y la restauracioacuten ecoloacutegica de estos espacios con el fin de minimizar la peacuterdida de bienes y servicios ambientales para el conjunto de la sociedad

Figura 1 La presioacuten constructiva sobre muchos territorios es tal que como en el caso que muestra la fotografiacutea el trazado de una carretera anterior relleno por materiales de escombrera puede quedar incorporado a modo de registro sedimentario en el des-monte de una carretera maacutes reciente La liacutenea blanca discontinua sentildeala esta exposicioacuten singular Sobre ella pueden identificarse un corte perpendicular de la plataforma de la carretera el asfalto (A) las cunetas (B) y los antiguos desmontes (C) (Foto F Barbero)

2 Un enfoque geomorfoloacutegico para comprender el problema

Cualquier superficie terrestre funciona como un sis-tema que tiende a mantener un lsquoequilibrio dinaacutemicorsquo entre las formas del terreno que observamos y los procesos geomorfoloacutegicos e hidroloacutegicos que actuacutean sobre ellas En efecto con anterioridad a las modi-ficaciones humanas la mayor parte de las cuencas hidrograacuteficas en que se organiza el territorio estaacuten proacuteximas a una situacioacuten de equilibrio (que es siem-pre dinaacutemico) y los procesos de erosioacuten transporte y sedimentacioacuten estaacuten adaptados a las condiciones ambientales existentes (Graf 1977)

La construccioacuten de infraestructuras lineales supone una perturbacioacuten antroacutepica de primera magnitud en

CAPIacuteTULO 2 Consideraciones geomorfoloacutegicas e hidroloacutegicas

Joseacute F Martiacuten Duque Saturnino de Alba y Fernando Barbero Abolafio

I INTRODUCCIOacuteN

1 La construccioacuten de infraestructuras lineales como proceso geomorfoloacutegico

El movimiento de tierras asociado a la construccioacuten de infraestructuras lineales constituye uno de los procesos geomorfoloacutegicos maacutes activos y efectivos a escala global Hooke (1994) estimoacute que la construc-cioacuten de carreteras en Estados Unidos movilizaba tres gigatoneladas de materiales al antildeo (en 1994) Esta cifra suponiacutea casi el 40 del total de movimientos de tierras por actividades humanas en Estados Uni-dos completado por 1 Gtantildeo de la urbanizacioacuten y 38 Gtantildeo de la mineriacutea de superficie Y la suma de todos ellos se situaba en el mismo orden de mag-nitud que lo estimado para los agentes geoloacutegicos denominados lsquonaturalesrsquo en ese contexto espacial y temporal (riacuteos glaciares vientohellip) (Hooke 1994)

En Espantildea la previsioacuten inicial del Plan Espantildeol de Infraestructuras de Transportes (PEIT) era construir entre 2005 y 2020 un total de 6000 km de auto-viacuteas y autopistas y 9000 km de ferrocarril de alta velocidad incluyendo la adecuacioacuten de liacuteneas exis-tentes a altas prestaciones (Ministerio de Fomento 2005) Utilizando una estimacioacuten de movimiento de tierras de 10 m3 por metro lineal construido y una densidad aparente de 2 tm3 se obtiene una cifra de movimiento de tierras de en torno a 300 millo-nes de toneladas (20 millones de toneladas al antildeo) De nuevo utilizando la estimacioacuten del transporte de sedimentos desde los riacuteos hasta los oceacuteanos para Espantildea a partir del trabajo de Syvitski et al (2005)

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tanto no solo modifica la cubierta vegetal y edaacutefica sino todos los componentes de la superficie terres-tre (como sustrato y topografiacutea) Ello origina todo un conjunto de nuevas formas del terreno a modo de auteacutenticas morfologiacuteas erosivas (pe desmontes) y de verdaderas acumulaciones sedimentarias (pe terraplenes) asiacute como nuevas condiciones hidroloacutegi-cas y edaacuteficas En definitiva la apertura de infraes-tructuras lineales altera las condiciones de ese lsquoequi-librio dinaacutemicorsquo Normalmente se produce una acele-racioacuten de los procesos geomorfoloacutegicos activos en el dominio de carreteras y ferrocarriles pero tambieacuten ocurre una deceleracioacuten o anulacioacuten de los mismos como sucede en las superficies pavimentadas En todo caso siempre acontece una modificacioacuten de los flujos de agua y materiales en todo su contexto

Los nuevos procesos desencadenados por la cons-truccioacuten de infraestructuras lineales que actuacutean so-bre las nuevas formas del relieve creadas (desmontes

Figura 3 Morfologiacuteas que se desarrollan de manera maacutes lsquotiacutepicarsquo sobre cada una de las litologiacuteas detriacuteticas que caracterizan los desmontes de las infraestructuras lineales de la cuenca de Madrid bajo condiciones climaacuteticas mediterraacuteneas (en Barbero et al 2009a) (Fotos JF Martiacuten Duque)

terraplenes bermas plataformashellip) y sobre su en-torno son una manifestacioacuten del trabajo geomorfo-loacutegico para restablecer un nuevo equilibrio dinaacutemico entre las formas del terreno creadas por la actividad constructiva y los procesos geomorfoloacutegicos activos que son caracteriacutesticos de las condiciones ambienta-les locales (Schumm y Rea 1995) Este es el motivo por el cual el entorno de las infraestructuras lineales especialmente los desmontes de carreteras y ferro-carriles constituyen escenarios donde la dinaacutemica geomorfoloacutegica es muy evidente (Petersen 2002)

Para analizar y comprender esa dinaacutemica es posible seguir una aproximacioacuten geomorfoloacutegica lsquoclaacutesicarsquo basada en el anaacutelisis de las formas del terreno y de los procesos que las originan (Pedraza 1996) La diferencia fundamental es la escala de detalle de este nuevo anaacutelisis (Figura 2) que permite hablar de toda una lsquogeomorfologiacutea de carreterasrsquo ya iniciada en algunos trabajos (Barbero et al 2009a Figura 3)

Figura 2 Flujos de barro (mudflows) en un pequentildeo desmonte de una carretera local Los procesos geomorfoloacutegicos que se desarrollan en estos desmontes son similares a los que operan en otros ambientes continentales (por ejemplo zonas de montantildea) pero tienen mucho menor tamantildeo (Foto JF Martiacuten Duque)

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A Distinta respuesta morfoloacutegica seguacuten la litolo-giacutea Sobre conglomerados (con tonos maacutes grisaacute-ceos) la red de drenaje tiene un menor grado de incisioacuten debido a la presencia de cantos y blo-ques que dificultan el encajamiento en los ma-teriales maacutes arenosos (con tonos maacutes rojizos) la escorrentiacutea concentrada consigue desarrollar una red paralela de regueros (rills)

B Patroacuten de drenaje paralelo muy bien definido El espaciado regular entre el conjunto de regueros (rills) y sus interfluvios en la base del desmonte se interpreta como una herencia del acabado del talud con las untildeas de una retroexcavadora que posteriormente es remodelado y exagerado por la erosioacuten hiacutedrica

C Los procesos erosivos actuacutean de manera raacutepida y efectiva en desmontes desarrollados sobre ma-teriales no consolidados o poco consolidados y son maacutes efectivos cuanto maacutes arenoso es el ma-terial del desmonte La red de drenaje en este tipo de materiales arenosos es subparalela ten-dente a dendriacutetica

D La presencia de materiales arcillosos en los ta-ludes favorece el desarrollo de redes de drenaje con una mayor tendencia a ser dendriacuteticas Se reproduce asiacute a escala de gran detalle el mismo tipo de red de drenaje que ocurre en paisajes dominados por sustratos de dominancia arcillosa

E Los desmontes construidos sobre lutitas con fre-cuencia son maacutes verticales que sobre otros mate-riales puesto que su cohesioacuten lo permite Estas paredes casi verticales sufren procesos de meteo-rizacioacuten formando estructuras tipo pop-corn una especie de lsquocostrarsquo que en este caso tiene entre unos pocos miliacutemetros y 2 cm de espesor y se agrieta formando poliacutegonos de 3-4 cm de radio Estos lsquofragmentos de cortezarsquo sufren caiacutedas acu-mulaacutendose en la base del desmonte a modo de talud de derrubios Una vez que la costra se cae esta vuelve a formarse y a fragmentarse a partir de sucesivos ciclos de humectacioacuten-desecacioacuten hasta que vuelven a sufrir nuevas caiacutedas Ocasio-nalmente aparecen morfologiacuteas de tipo flujo de barro (mudflow)

F Los desmontes de la imagen reproducen en mi-niatura el modelo geomorfoloacutegico de un escarpe montantildeoso La parte superior de talud aparece expuesta a los procesos de meteorizacioacuten-ero-sioacuten y la base del talud se caracteriza por una acumulacioacuten de derrubios a modo de lsquoderrame

enormemente su dinaacutemica geomorfoloacutegica de modo que las rocas lsquodurasrsquo (macizos rocosos) son propen-sas a la ocurrencia de movimientos gravitacionales (como caiacutedas y desprendimientos) pero no a la ero-sioacuten hiacutedrica mientras que las rocas lsquoblandasrsquo (referi-das frecuentemente como lsquosuelosrsquo en el mundo de la ingenieriacutea) son maacutes propensas a la erosioacuten hiacutedrica aunque tambieacuten desarrollan movimientos gravitacio-nales (como deslizamientos y flujos) El clima es otro factor de primer orden los climas lsquohuacutemedosrsquo favorecen la ocurrencia de movimientos gravitacio-nales por saturacioacuten y aumento de la presioacuten del agua en el sustrato mientras que en climas ten-dentes a la aridez como los mediterraacuteneos semiaacute-ridos o aacuteridos la erosioacuten hiacutedrica es muy intensa dado que las precipitaciones aunque escasas y de corta duracioacuten tienen gran intensidad Finalmente

dentro de un mismo contexto geoloacutegico y climaacute-tico los desmontes y los terraplenes constituyen dos mundos aparte dado que los primeros dejan expuestos sustratos geoloacutegicos de muy distinta naturaleza mientras que los segundos se constru-yen a partir de materiales lsquosueltosrsquo cuyas carac-teriacutesticas fiacutesicas aun compactados les hacen muy diferentes a los desmontes

En Espantildea las principales limitaciones geomor-foloacutegicas a la restauracioacuten ecoloacutegica tienen lugar cuando se solapan en un mismo territorio el clima mediterraacuteneo semiaacuterido con precipitaciones esca-sas pero intensas y litologiacuteas no consolidadas o deacutebilmente consolidadas (como arenas limos arci-llas margas o yesos) lo que resulta en procesos de erosioacuten hiacutedrica muy intensa (veacutease Figura 3)

de laderarsquo (talus slope) que muestra una gran actividad geomorfoloacutegica Puntualmente son re-conocibles canales y acumulaciones de flujos de derrubios (debris flow) de nuevo en miniatura

El disentildeo y construccioacuten de las infraestructuras li-neales deben estar encaminados a reorganizar la red de drenaje que se modifica y a garantizar una esta-bilidad geoteacutecnica del conjunto dadas las caracteriacutes-ticas de seguridad que deben existir en estos espa-cios En este contexto el teacutermino lsquoinestabilidadrsquo apli-cado a taludes de infraestructuras lineales se asocia mayoritariamente a la ocurrencia o a la propensioacuten de ocurrencia de los llamados lsquoprocesos gravitacio-nalesrsquo lsquomovimientos de laderarsquo o lsquomovimientos en masarsquo de tipo caiacutedas flujos y deslizamientos (Pedra-za 1996) y que son normalmente de cierta entidad

Sin embargo los criterios de seguridad geoteacutecnica no aseguran por siacute solos una estabilidad completa de los taludes puesto que casi siempre existe una inestabilidad geomorfoloacutegica gravitacional lsquomenorrsquo (movimientos en masa muy superficiales) y sobre todo asociada a la erosioacuten hiacutedrica (arranque y trans-porte de materiales por el flujo de la escorrentiacutea)

La inestabilidad del sustrato de taludes de infraes-tructuras lineales debida a movimientos gravita-cionales superficiales y a la erosioacuten hiacutedrica limita extraordinariamente sus posibilidades de restaura-cioacuten ecoloacutegica al evacuar de ellos agua nutrien-tes y diaacutesporas vegetales (veacutease capiacutetulo sobre ve-getacioacuten) Tanto es asiacute que existen ya demasiados ejemplos de fallos en los protocolos de revegetacioacuten habituales en estos espacios debidos a la inestabi-lidad geomorfoloacutegica

En este contexto las labores de disentildeo construccioacuten y restauracioacuten de infraestructuras lineales deberiacutean tratar de comprender y minimizar las modificaciones hidroloacutegicas y la actividad geomorfoloacutegica asiacute como de controlarla y manejarla adecuadamente desde su conocimiento dejando un lsquoajuste maacutes finorsquo a los procesos naturales que actuaraacuten despueacutes de esas intervenciones (Toy y Black 2000) Obviamente la consideracioacuten realizada es muy general y debe adap-tarse a los distintos condicionantes y escenarios

Dentro de estos y como una primera aproximacioacuten habriacutea que distinguir entre el marco litoloacutegico y cli-maacutetico asiacute como la naturaleza del talud puesto que una variacioacuten de cada uno de esos factores introdu-ce otros de naturaleza ecoloacutegica que son determi-nantes Asiacute por ejemplo el tipo de sustrato sobre el que se construye la infraestructura condiciona

II REVISIOacuteN DEL CONOCIMIENTO

Existen dos grandes bloques de antecedentes biblio-graacuteficos sobre los aspectos tratados en este capiacutetulo Por un lado se situacutean los que podriacuteamos denominar lsquotradicionalesrsquo o lsquoconvencionalesrsquo dejando claro que esta clasificacioacuten ni tiene caraacutecter peyorativo ni les resta validez pues constituyen el punto de partida para otros enfoques

Estos pueden tener a su vez naturaleza hidroloacutegica o geoteacutecnica Es preciso explicar que este capiacutetulo intenta sintetizar sus aspectos esenciales pero en ninguacuten caso intenta incorporar una revisioacuten detalla-da sobre ellos dado que estaacuten ampliamente desa-rrollados en muy diversas publicaciones De ellas se ofrece una seleccioacuten de referencias uacutetiles en cas-tellano

Asiacute las cosas para el control del drenaje superficial (escorrentiacutea y sus caudales punta) aspecto funda-mental en la construccioacuten de infraestructuras linea-les existe una instruccioacuten de carreteras (52-1C) de obligado cumplimiento basada en el meacutetodo racio-nal con uso del nuacutemero de curva en la estimacioacuten de las abstracciones iniciales (BOE 1990) Ambos meacutetodos estaacuten bien desarrollados en el manual ya claacutesico de TRAGSA (1994)

Respecto a los antecedentes sobre estabilidad geo-teacutecnica de taludes dado que los movimientos gra-vitacionales (caiacutedas deslizamientos flujoshellip) son el tipo de inestabilidad maacutes comuacuten en el entorno de las infraestructuras lineales la literatura sobre este

tipo de procesos es abundante Algunos libros mo-dernos en castellano son los de Gonzaacutelez de Vallejo (2002) o Ayala y Andreacuteu (2006)

En estos manuales se desarrollan las medidas ha-bituales para la prevencioacuten y correccioacuten de movi-mientos del terreno en taludes de infraestructuras lineales como el empleo de bulones que ayudan a mantener la friccioacuten entre bloques adyacentes de rocas el uso de todo tipo de mallas o la instalacioacuten de drenajes que evacuan el agua del interior de los taludes evitando el aumento de su presioacuten y redu-ciendo por tanto la probabilidad de que ocurran inestabilidades

El estudio y la adopcioacuten de medidas hidroloacutegicas y geoteacutecnicas que aquiacute hemos agrupado como lsquotradi-cionalesrsquo o lsquoconvencionalesrsquo pueden ser necesarios en una parte de los casos ya sea como punto de partida o bien como solucioacuten definitiva Pero al mis-mo tiempo es preciso sentildealar que el control o ma-nejo de las dinaacutemicas hidroloacutegica y geomorfoloacutegica en el entorno de las infraestructuras lineales reali-zado desde una aproximacioacuten ecoloacutegica requiere ir maacutes allaacute de esos planteamientos baacutesicos Incluso puede diferir sustancialmente de ellos Esto es asiacute porque el criterio que ha regido y rige las actua-ciones sobre estas materias en las infraestructuras lineales ha tenido y tiene en cuenta casi exclusi-vamente factores de seguridad Y si bien es obvio que este factor no puede descuidarse en absoluto no es menos cierto que existen ya experiencias que

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III INCIDENCIA DE LOS PROCESOS GEOLOacuteGICOS E HIDROLOacuteGICOS ACTIVOS SOBRE LAS INFRAESTRUCTURAS RIESGOS NATURALES

Si bien la construccioacuten de infraestructuras lineales tiene como consecuencia el desencadenamiento de toda una serie de procesos geomorfoloacutegicos activos (que seraacuten tratados en el siguiente apartado) lo cier-to es que existen posibles afecciones de procesos geoloacutegicos e hidroloacutegicos activos cuya ocurrencia no estaacute asociada en principio ni a las infraestructuras lineales ni a los efectos de su construccioacuten Es el caso de terremotos erupciones volcaacutenicas grandes deslizamientos de laderas o procesos de erosioacuten o inundacioacuten que afectan a las infraestructuras linea-les sin que la construccioacuten de estas uacuteltimas tenga influencia alguna en los primeros

consiguen garantizar el objetivo de hacer posible un transporte seguro y eficiente de personas y bienes a lo largo del territorio asegurando simultaacuteneamente una disminucioacuten de sus efectos ecoloacutegicos una in-tegracioacuten ambiental eficiente y una reduccioacuten de los costes econoacutemicos (veacutease maacutes adelante por ejem-plo la solucioacuten del lsquotalud Royalrsquo)

En esta oacuterbita se situacutea un segundo bloque de an-tecedentes bibliograacuteficos que persigue introducir nuevas consideraciones geomorfoloacutegicas e hidroloacute-gicas para la integracioacuten ambiental y la restauracioacuten ecoloacutegica del entorno de infraestructuras lineales Este enfoque requiere en general soluciones maacutes imaginativas maacutes flexibles y un anaacutelisis particu-larizado del contexto hidroloacutegico y geomorfoloacutegico del lugar que se modifica Todo lo cual se aleja en cierto modo del modus operandi dominante carac-terizado por lsquouna forma rutinaria de hacer las cosasrsquo (bussiness as usual) En este sentido el objetivo de este capiacutetulo es proporcionar unas consideraciones generales pero no por ello menos importantes que permitan lsquorepensarrsquo los proyectos de disentildeo cons-truccioacuten y restauracioacuten de infraestructuras lineales desde una perspectiva que considere como conjunto esencial de las mismas su dinaacutemica geomorfoloacutegica e hidroloacutegica

Para abordar ese enfoque la revisioacuten del conoci-miento no puede centildeirse a trabajos en castellano por ser muy escasos y parte de una serie de es-tudios realizados desde las deacutecadas de los sesen-ta y los setenta en Estados Unidos Estos abordan cuestiones sobre cuantificacioacuten de los procesos de escorrentiacutea erosioacuten y sedimentacioacuten hiacutedricas en ta-ludes de infraestructuras lineales y sobre la adop-cioacuten de medidas para su control Inicialmente los trabajos consistieron en una aplicacioacuten de la expe-riencia adquirida sobre erosioacuten en tierras agriacutecolas como la Ecuacioacuten Universal de Peacuterdidas del Suelo (USLE) que luego fueron completados con estudios experimentales ad hoc (Diseker y Richardson 1961 1962 Diseker y Sheridan 1971 Meyer et al 1971 Meyer y Roumlmkens 1976) Posteriormente estos tra-bajos tuvieron un mayor desarrollo de nuevo en Estados Unidos a partir de la aprobacioacuten en 1972 de la Clear Water Act Esta ley se dictoacute para pro-teger la calidad de las aguas continentales y los ecosistemas acuaacuteticos de la emisioacuten de escorrentiacutea y sedimentos desde las denominadas zonas lsquocons-truidasrsquo (minas carreteras urbanizacioneshellip) hacia los cauces naturales

En el marco de la Clear Water Act los estudios se refirieron inicialmente a los efectos hidroloacutegicos

debidos a la construccioacuten de pistas y carreteras forestales (Megahan 1977 Reid y Dunne 1984 Montgomery 1994 Gucinski et al 2000) La im-portancia de estos trabajos dariacutea lugar en el antildeo 2001 a la publicacioacuten de un monograacutefico espe-cial de la revista Earth Surface Processes and Lan-dforms sobre los efectos hidroloacutegicos y geomor-foloacutegicos de las carreteras forestales (Luce y Wemple 2001)

En paralelo al estudio de los efectos geomorfoloacutegico e hidroloacutegico de las pistas forestales se fueron de-sarrollando trabajos que abordan especiacuteficamente la temaacutetica geomorfoloacutegica en el aacutembito de las ca-rreteras y las viacuteas raacutepidas Alguno de estos trabajos tiene maacutes de 40 antildeos (Parker y Jenne 1967) y otros son bastante maacutes recientes (Haigh 1985 Al-Homoud et al 1999 Nyssen et al 2002)

La publicacioacuten de soluciones para el control efectivo de la erosioacuten y la sedimentacioacuten desde el aacutembito general de zonas sujetas a movimientos de tierras o lsquozonas construidasrsquo es comuacuten de nuevo en Es-tados Unidos (Gray y Sotir 1996 Fifield 2004 Ho-gan y Drake 2009 Bugosh 2006 y en general todo lo relacionado con la International Erosion Control Association IECA httpwwwiecaorg) De manera especiacutefica la mayoriacutea de los estados de ese paiacutes cuenta con manuales e instrucciones detalladas so-bre el control de la erosioacuten y sobre el resto de los aspectos tratados en este capiacutetulo (veacutease a modo de ejemplo WSDOT 2010)

A su vez cabe destacar que algunos trabajos recien-tes estaacuten desarrollando anaacutelisis sobre la calidad de las aguas procedentes de la escorrentiacutea de las carre-teras (Riley et al 2008)

Sin embargo en Espantildea los temas sobre cuantifi-cacioacuten de los procesos de escorrentiacutea erosioacuten y se-dimentacioacuten hiacutedricas en taludes de infraestructuras lineales y la buacutesqueda de medidas de control efi-caces pueden considerarse como liacuteneas de trabajo (tanto desde un punto de vista profesional como desde la investigacioacuten) muy poco desarrolladas Ello puede ser debido quizaacutes a la inexistencia de normativas similares a la Clear Water Act En todo caso la guiacutea para la elaboracioacuten de estudios de im-pacto ambiental de carreteras y ferrocarriles (MOPU 1989) sintetiza bien los aspectos clave que deben abordarse en referencia a los aspectos tratados en este capiacutetulo (recogidos alliacute bajo los epiacutegrafes de geologiacutea geomorfologiacutea hidrologiacutea y suelos) Y otra serie de trabajos maacutes especiacuteficos constitu-yen ya un cataacutelogo de antecedentes de intereacutes en

La prediccioacuten y prevencioacuten de este tipo de afeccio-nes no inducidas por la construccioacuten de carrete-ras y ferrocarriles deberiacutea formar parte de un tipo de estudios especiacuteficos sobre riesgos geoloacutegicos y naturales desarrollados en las fases iniciales de consideracioacuten de alternativas y de disentildeo de esas infraestructuras lineales Este tipo de anaacutelisis no se considera en este manual por superar sus objetivos y se emplaza al usuario a utilizar otras guiacuteas que los tratan en profundidad Veacuteanse por ejemplo en castellano y recientes Ayala y Olcina (2002) Aramburu et al (2006) Keller y Blodgett (2007) o Regueiro (2008)

IV INCIDENCIA DE LAS INFRAESTRUCTURAS SOBRE EL MEDIO IMPACTO GEOMORFOLOacuteGICO E HIDROLOacuteGICO

1 Las causas

Las modificaciones que introducen las infraestruc-turas lineales sobre las caracteriacutesticas geoloacutegicas geomorfoloacutegicas edaacuteficas e hidroloacutegicas pueden analizarse a dos niveles a escala de ladera por variacioacuten de las condiciones fiacutesicas locales de los nuevos taludes creados y a escala de paisaje por alteracioacuten de los flujos y los procesos que operan en el entorno de las infraestructuras

a Modificacionesdelascondicionesgeomorfoloacutegicasehidroloacutegicaslocales

El acabado final de los taludes de las infraestruc-turas lineales transforma una serie de factores que favorecen su inestabilidad geomorfoloacutegica tales como producir un aumento de la pendiente cortar niveles freaacuteticos y modificar las propiedades fiacutesicas de los sustratos expuestos entre otros

Ciertamente la praacutectica constructiva de infraestruc-turas lineales lleva aparejada un aumento de la pendiente local de una buena parte del territorio modificado La alteracioacuten de este factor por siacute solo

contribuye a aumentar la inestabilidad de los nue-vos taludes creados En otros casos sin embargo puede producirse una disminucioacuten de la pendiente como ocurre en las propias plataformas o en algu-nos terraplenes

A su vez una buena parte de las excavaciones asociadas a la construccioacuten de infraestructuras cortan formaciones geoloacutegicas que almacenan y transmiten agua lo que origina surgencias y re-zumes en los desmontes Esta circunstancia que podriacutea parecer una ventaja para la restauracioacuten ecoloacutegica en ambientes semiaacuteridos acaba convir-tieacutendose en la mayor parte de los casos en un pro-blema porque acelera la actividad geomorfoloacutegica de los desmontes Se desencadenan asiacute distintos tipos de movimientos gravitacionales los cuales aparecen recogidos en la literatura como seepage erosion La experiencia muestra coacutemo la previsioacuten de afectar a la dinaacutemica de las aguas subterraacuteneas es uno de los aspectos menos considerados y maacutes difiacuteciles de controlar en la construccioacuten de carrete-ras y ferrocarriles (Figuras 4 y 5)

nuestro paiacutes (Arnaacuteez y Larrea 1995 Andreacutes y Jorba 2000 Navarro 2002 Bochet y Garciacutea-Fayos 2004

Bochet et al 2007a 2007b y 2010 Barbero et al 2009a 2009b)

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Figura 4 Cabecera de deslizamiento (A) y derrubios movilizados (B) en un desmonte de carretera a favor de una surgencia de agua (C) producida en el contacto entre una roca impermeable (D) y unos cantos y bloques permeables (E) correspondientes a un depoacutesito de abanico aluvial (Foto JF Martiacuten Duque)

Figura 5 Ejemplo de seepage erosion en un desmonte construido sobre materiales arenosos (Foto J Vaacutezquez)

De manera adicional se modifican las propiedades fiacutesicas de las nuevas superficies expuestas sobre

Figura 7 Ejemplo de encharcamiento ocasionado por el efecto lsquobarrera o presarsquo que ejerce la carretera sobre el flujo hidroloacutegico superficial y subterraacuteneo procedente de la ladera de la derecha de la imagen (Foto JF Martiacuten Duque)

Una consecuencia maacutes es la modificacioacuten que se produce en la recarga de los acuiacuteferos como conse-cuencia de las alteraciones de la dinaacutemica hidroloacutegi-ca superficial y subterraacutenea antes descritas

2 Los efectos Impactos geomorfoloacutegicos e hidroloacutegicos habituales

Al igual que las causas los impactos geomorfoloacutegi-cos e hidroloacutegicos ocasionados por la construccioacuten de las infraestructuras lineales pueden agruparse en dos grandes tipologiacuteas efectos sobre el propio aacutembito de las construcciones (on-site effects) y efectos sobre el entorno de las construcciones (off-site effects)

a Efectoson-site

Las consecuencias que produce la modificacioacuten de la pendiente y la alteracioacuten de las propiedades fiacutesicas e hidroloacutegicas de los nuevos sustratos expuestos en los taludes fundamentalmente en los desmontes se manifiestan generalmente en un aumento de la escorrentiacutea y en una mayor intensidad de los pro-cesos erosivos Ello limita el desarrollo del suelo y el establecimiento de la vegetacioacuten dificultando los procesos de restauracioacuten ecoloacutegica (veacuteanse capiacutetu-los sobre suelo y vegetacioacuten)

Estos procesos son particularmente severos en am-bientes de clima mediterraacuteneo semiaacuterido donde el

exceso de escorrentiacutea dificulta mucho su control y manejo Y se traduce en una baja disponibilidad hiacute-drica para las plantas lo que condiciona extraordina-riamente su germinacioacuten y establecimiento (Bochet et al 2007a)

Uno de los efectos maacutes evidentes de la erosioacuten hiacutedri-ca sobre los desmontes de carreteras y ferrocarriles es la emisioacuten de sedimentos desde los mismos que se acumulan a su pie o en las distintas superficies colectoras pavimentadas o no (Figura 8) Estos fe-noacutemenos si bien en la mayoriacutea de los casos no constituyen un riesgo para la seguridad vial siacute que afectan con frecuencia a bienes y servicios y supo-nen uno de los principales costes de mantenimiento de las infraestructuras lineales Por otro lado algu-nos avances e inversiones relevantes en las viacuteas como puede ser el uso de pavimentos o asfaltos permeables o de nuevos materiales pueden fraca-sar como consecuencia del efecto impermeabilizante que tienen las emisiones de materiales finos proce-dentes de la erosioacuten de los taludes transportados hasta alliacute por la accioacuten del agua o del viento

Figura 8 Acumulacioacuten de sedimentos procedentes de un desmonte que praacutecticamente colmata una cuneta (Foto JF Martiacuten Duque)

Si la erosioacuten en los taludes se convierte en el proceso dominante la restauracioacuten se veraacute com-prometida Se puede afirmar que sin un lsquomanejorsquo adecuado de la dinaacutemica superficial de los talu-des que proporcione a los mismos una estabilidad geomorfoloacutegica suficiente la mayoriacutea de los planes de restauracioacuten y de revegetacioacuten estaacuten abocados al fracaso (Figura 9)

A

B

D

E

C

todo en el caso de la construccioacuten de desmontes Asiacute por ejemplo los procesos de excavacioacuten ori-ginan procesos de lsquodescompresioacutenrsquo (descompac-tacioacuten y lsquoesponjadorsquo en los sustratos expuestos) como resultado de la disminucioacuten brusca de las presiones litostaacuteticas confinantes lo que favorece su fragmentacioacuten e inestabilidad Este fenoacutemeno es muy evidente cuando se excavan macizos ro-cosos Y si se construyen desmontes sobre rocas lsquoblandasrsquo los acabados lsquoestaacutendarrsquo suelen generar superficies lisas y compactadas lo que tiene como consecuencia innumerables efectos limitantes para la restauracioacuten (como pe una erosioacuten hiacutedrica se-vera) los cuales se desarrollan en el epiacutegrafe 2a de este capiacutetulo

b Modificacionesdelascondicionesgeomorfoloacutegicasehidroloacutegicasdelentorno

La consecuencia hidroloacutegica maacutes evidente de la construccioacuten de infraestructuras lineales es lo que se conoce como lsquoefecto barrerarsquo Los trazados de carreteras y ferrocarriles se convierten asiacute en toda una red de barreras hidroloacutegicas longitudinales que modifican la dinaacutemica hidroloacutegica superficial y subterraacutenea previa Ello produce la intercepcioacuten desviacioacuten y descarga concentrada de la escorren-tiacutea Las cunetas interceptan y desviacutean la escorren-tiacutea local que finalmente es liberada de manera concentrada en los colectores que constituyen los drenajes de las infraestructuras La Figura 6 ilustra graacuteficamente este efecto

Figura 6 Izquierda ejemplo de escorrentiacutea sin infraestructura lineal derecha ejemplo de la misma escorrentiacutea con infraestruc-tura lineal Redibujado a partir de un esquema de Lenore Fahrig (ineacutedito)

Otro efecto bien conocido es la formacioacuten de enchar-camientos debidos a ese mismo lsquoefecto barrerarsquo en este caso maacutes bien lsquoefecto presarsquo que ocasiona la infraestructura al interceptar las liacuteneas de flujo de circulacioacuten hidroloacutegica (tanto superficial como sub-terraacutenea Figura 7)

Carretera

Desaguumle

Escorrentiacutea

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Figura 9 Deslizamientos superficiales del terreno en desmontes de una autopista que desbaratan las actuaciones de revegetacioacuten realizadas sobre ellos (Foto JF Martiacuten Duque)

b Efectosoff-site

Constituyen probablemente las consecuencias maacutes adversas y menos estudiadas y abordadas desde un punto de vista teacutecnico y de investigacioacuten precisa-mente por situarse lsquofuerarsquo del aacutembito de las carre-teras y los ferrocarriles La mayor parte de estos impactos se debe al efecto que tienen las infraes-tructuras lineales interceptando desviando y con-centrando los flujos de escorrentiacutea y sedimentos de su entorno pero tambieacuten procedentes del aacutembito de las propias viacuteas y taludes y emitiendo los mismos de manera concentrada

Un impacto comuacuten sobre el entorno consiste en la formacioacuten de caacutercavas a la salida de los drenajes de las infraestructuras (Figuras 10 y 11) Las principales causas de formacioacuten de estas morfologiacuteas erosivas se deben a la concentracioacuten de flujos superficiales a partir de los sistemas de desaguumle que liberan de manera concentrada el drenaje de cuencas que han incrementado su aacuterea (Montgomery 1994 Nyssen et al 2002) (Figura 10) Pero tambieacuten al evacuar siempre de manera concentrada la escorrentiacutea generada en el interior de las construcciones y su entorno (Figura 11)

La formacioacuten de estas caacutercavas pero tambieacuten la emisioacuten de sedimentos que tiene lugar a partir de ellas afectan de manera negativa a la calidad de los suelos del entorno de las infraestructuras por ate-rramiento de los perfiles de suelo feacutertil en zonas de depoacutesito produciendo una inversioacuten edaacutefica Todo ello supone una merma de su calidad y capacidad agriacutecola forestal y ecoloacutegica

El efecto barrera o presa y el desaguumle repentino de escorrentiacutea a traveacutes de colectores puede dar lu-gar a inundaciones con efectos catastroacuteficos aguas abajo La conjuncioacuten del efecto barrera y de un funcionamiento deficiente de los desaguumles en la carretera M-45 fue una de las hipoacutetesis considera-das en unas inundaciones ocurridas en septiembre de 2008 en el municipio madrilentildeo de Coslada con resultado de una persona muerta y considerables dantildeos econoacutemicos

El caso extremo de estas situaciones tiene lu-gar cuando se produce una rotura de terraplenes que han represado la escorrentiacutea lo que puede de nuevo tener efectos desastrosos A modo de ejemplo en septiembre de 1999 se produjo el desmoronamiento de un tramo de 200 metros de terrapleacuten del ferrocarril Villalba-Aacutevila (entre sus puntos kilomeacutetricos 99 y 100) que actuoacute como presa en un aguacero Ello tuvo graves secuelas

aguas abajo (en la poblacioacuten de El Herradoacuten) e interrumpioacute el traacutefico ferroviario entre Madrid y el noroeste peninsular durante casi un mes Este suceso asiacute como otros similares se describen en detalle en Diacuteez (2003)

Finalmente un impacto claramente adverso consiste en la emisioacuten de escorrentiacutea pero sobre todo de sedimentos a la red fluvial situada en el entorno de las infraestructuras Y es que los sedimentos pro-cedentes del aacutembito de estas construcciones llegan con mucha frecuencia a las redes hidrograacuteficas maacutes cercanas ocasionando un claro impacto sobre los sistemas fluviales (que variacutean su morfologiacutea y dinaacute-mica) y sobre los ecosistemas acuaacuteticos Aunque en Espantildea faltan estudios en este sentido todo parece indicar que las emisiones a los cursos fluviales des-de taludes de carreteras y ferrocarriles pueden supo-ner una de las principales fuentes de sedimentos en muchas cuencas hidrograacuteficas

Figura 10 Formacioacuten de una caacutercava a la salida de una bajante so-bre un terrapleacuten Las cunetas de una autoviacutea interceptan y desviacutean la escorrentiacutea local que finalmente es liberada de manera concen-trada en este punto con el consiguiente efecto erosivo (Foto JF Martiacuten Duque)

Figura 11 Formacioacuten de una caacutercava a la salida de una cuneta que recoge la escorrentiacutea procedente del aacutembito de una autopista (viacuteas y desmontes) (Foto JF Martiacuten Duque)

V LA ADOPCIOacuteN DE SOLUCIONES DESDE ENFOQUES GEOMORFOLOacuteGICOS E HIDROLOacuteGICOS

1 Hacia una integracioacuten ambiental eficiente en las fases de planificacioacuten y disentildeo

Maacutes allaacute de la adopcioacuten de medidas correctoras localizadas estaacute ampliamente demostrado que es en las fases de planificacioacuten y disentildeo donde puede realizarse la mejor integracioacuten ambiental posible de las infraestructuras lineales de transporte Asiacute las cosas si hubiera que realizar una recomendacioacuten general esta consistiriacutea en retomar la praacutectica del lsquoanaacutelisis del lugarrsquo que ha caracterizado a los mejo-res proyectos de ingenieriacutea a lo largo de la historia utilizando precisamente el ingenio humano Y ello frente a la praacutectica dominante que tiende a impo-ner unas soluciones estaacutendar para cualquier esce-nario al margen de las caracteriacutesticas especiacuteficas del territorio

Una correcta integracioacuten de los factores geoloacutegi-cos geomorfoloacutegicos e hidroloacutegicos debe evitar o minimizar la posibilidad de que las infraestructuras

sean afectadas por procesos geoloacutegicos y geomor-foloacutegicos activos (no relacionados con la infraes-tructura) Todo ello mediante un anaacutelisis de peligro-sidad y riesgo (Ayala y Olcina 2002) que ayude a no situar las infraestructuras en lugares inadecuados desde esta perspectiva Y no solo con el objetivo de reducir la probabilidad de peacuterdidas humanas sino con la finalidad de reducir los costes econoacutemi-cos posteriores en obras de defensa y en medidas correctoras

Para ello se deberiacutean identificar y evaluar aacutereas susceptibles de estar sujetas a procesos de ero-sioacuten (Figura 12) deslizamientos terremotos sub-sidenciashellip u otros peligros geoloacutegicos que supon-gan una amenaza seria a las infraestructuras y que por tanto hagan incompatible su ubicacioacuten en esas zonas

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Figura 12 Bloque diagrama idealizado que muestra los dantildeos producidos a la autopista 140 (en el suroeste de Colorado Estados Unidos) en un tramo en el que atraviesa un fondo de valle muy afectado por procesos de piping y erosioacuten en caacutercavas En Parker y Jenne (1967)

de terrenos afectados por mineriacutea de superficie En Nicolau (2003) y en Martiacuten Duque et al (2010) puede encontrarse una siacutentesis de las distintas aproxima-ciones y de la literatura internacional maacutes relevante sobre estos temas Bugosh (2006) describe la que puede considerarse una de las aproximaciones maacutes avanzadas a nivel mundial a este respecto (meacutetodo GeoFluv y software Natural Regrade)

Tanto las bermas de tierra (earth berms) aunque se construyen fundamentalmente para compensar movimientos de tierra y como pantallas acuacutesticas o visuales como las escombreras podriacutean incorporar tambieacuten criterios geomorfoloacutegicos e hidroloacutegicos en su disentildeo y construccioacuten en lugar de centildeirse a unas pocas tipologiacuteas constructivas muy baacutesicas y estan-darizadas a nivel global Todo ello no con un fin exclusivamente visual o esteacutetico sino funcional tra-tando de garantizar la maacutexima integracioacuten ambien-tal y su estabilidad geomorfoloacutegica a largo plazo El libro de Schor y Gray (2007) ofrece un meacutetodo esencialmente visual sobre las posibilidades de di-sentildeo de estas formas del terreno mientras que en Bugosh (2006) se puede encontrar un enfoque maacutes funcional basado en principios de la geomorfologiacutea fluvial

Finalmente si bien es cierto que el proceso de cons-truccioacuten de infraestructuras lineales puede destruir o dantildear elementos geoloacutegicos y geomorfoloacutegicos de intereacutes no es menos cierto que este proceso cons-tructivo puede crear exposiciones y afloramientos de enorme utilidad donde antes no existiacutean No identi-ficar los puntos y lugares de intereacutes geoloacutegico que se generan con frecuencia durante los procesos de construccioacuten de carreteras y ferrocarriles constituye uno de los errores maacutes habituales de esta activi-dad humana El desintereacutes hacia este aspecto suele afectar tambieacuten a las fases de restauracioacuten basadas exclusivamente en muchos casos en tratar de es-tablecer una cubierta vegetal a toda costa lo que puede destruir elementos geoloacutegicos de gran valor educativo cientiacutefico y turiacutestico

En Estados Unidos existe una amplia tradicioacuten en la identificacioacuten y puesta en valor mediante ma-teriales interpretativos (paneles miradores y hasta centros de visitantes) de estructuras y cortes geo-loacutegicos de gran valor que quedan expuestos a partir de la construccioacuten de infraestructuras lineales Uno de los ejemplos maacutes emblemaacuteticos lo constituye el corte geoloacutegico conocido como Sideling Hill Road Cut En este caso las obras de una autopista deja-ron expuesta de manera espectacular la estructura de un sinclinal colgado en una de las alineaciones

montantildeosas de los Apalaches (Figura 13) El valor de esta exposicioacuten es tal que cuenta con un pequentildeo centro de visitantes y con abundante material inter-pretativo ad hoc constituyendo un recurso didaacutectico y turiacutestico indudable

Figura 13 Superior fotografiacutea aeacuterea oblicua del Sideling Hill Road Cut El corte realizado por la autopista permite reconocer la estruc-tura interior de un sinclinal colgado el cual forma la alineacioacuten montantildeosa de la imagen (Foto Maryland Geological Survey 1998) Inferior detalle del corte y de la estructura geoloacutegica desde una plataforma habilitada para su observacioacuten (Foto JF Martiacuten Duque)

En el Reino Unido el corte Claverley Road Cutting estaacute reconocido como patrimonio geoloacutegico rele-vante para el estudio de ambientes fluviales del Triaacutesico (Ellis 1996) Y en Espantildea si bien existen algunos antecedentes de intereacutes lo cierto es que estos auacuten tienen un caraacutecter aislado y que apenas existe tradicioacuten en este sentido Es el caso del lsquoplie-gue Zaleskirsquo recogido incluso en la guiacutea metodo-loacutegica para la elaboracioacuten de estudios de impacto ambiental de carreteras y ferrocarriles (MOPU 1989 paacuteg 117) Un ejemplo sobresaliente lo constituye el trabajo realizado en torno al tuacutenel ordoviacutecico de Ribadesella (perteneciente a la Autoviacutea del Cantaacute-brico) En eacutel la integracioacuten entre el desarrollo de las obras las investigaciones cientiacuteficas y la divul-gacioacuten de la informacioacuten obtenida (con una expo-sicioacuten permanente en el Museo El Carmen de Ri-badesella) constituye un ejemplo modeacutelico (veacutease

Una de las recomendaciones maacutes efectivas para in-tegrar correctamente los factores geomorfoloacutegicos e hidroloacutegicos consiste en garantizar una miacutenima afec-cioacuten a la hidrologiacutea superficial y subterraacutenea a escala de paisaje aumentando siempre en la medida de lo posible la lsquopermeabilidadrsquo de los corredores de las infraestructuras Por ejemplo mediante la cons-truccioacuten del mayor nuacutemero posible de viaductos y drenajes

Dentro de este epiacutegrafe de lsquointegracioacuten ambientalrsquo merecen un comentario especiacutefico las constantes obras de lsquomejorarsquo (ampliar anchura arcenes reducir curvashellip) de carreteras locales muy poco transita-das o que discurren por espacios naturales o rurales remotos Bajo el argumento de garantizar un trans-porte seguro y eficiente lsquoen cualquier lugarrsquo es fre-cuente modificar severamente la topografiacutea local ex-poner sustratos no meteorizados que ocasionan un impacto ecoloacutegico y paisajiacutestico significativo verter derrubios a cauces fluviales y afectar a formaciones geomorfoloacutegicas relevantes o a elementos esencia-les de paisajes rurales valiosos (como vallados cen-tenarios de piedra o aacuterboles) Todo ello origina una peacuterdida del caraacutecter del paisaje en el que se insertan las propias viacuteas y del cual forman parte de manera indisoluble Asiacute se reconoce en la catalogacioacuten de

lsquocarreteras esceacutenicasrsquo en paiacuteses como Estados Uni-dos (scenic byways) o en la consideracioacuten que tie-nen estas viacuteas en la mayoriacutea de los paiacuteses del norte de Europa y de Ameacuterica en los que no cabe hablar de una falta de preocupacioacuten por la seguridad de las personas Su forma de actuar en estos casos podriacutea tomarse como ejemplo muy alejado de demasiadas praacutecticas que ponen de manifiesto una escasiacutesima sensibilidad hacia el territorio que se transforma

Pasando ya a una escala de lsquotaludrsquo se deberiacutean con-siderar las dinaacutemicas geomorfoloacutegica e hidroloacutegica locales desde su anaacutelisis y comprensioacuten como fac-tores esenciales en el disentildeo y construccioacuten de des-montes y terraplenes Ello podriacutea recomendar en la medida de lo posible el remodelado de los taludes variando sus perfiles rectiliacuteneos por otros geomor-foloacutegicamente maacutes estables (de topografiacutea normal-mente compleja) seguacuten dicte el anaacutelisis geomorfo-loacutegico local

Los preacutestamos vertederos y bermas de tierra de-beriacutean merecer un tratamiento especiacutefico dentro de la integracioacuten ambiental de las infraestructuras li-neales Para la restauracioacuten de preacutestamos pueden seguirse en realidad los mismos criterios que rigen las mejores praacutecticas para la restauracioacuten ecoloacutegica

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Gutieacuterrez Marco y Bernaacuterdez 2003) Sin embargo situaciones como la del tuacutenel ordoviacutecico son auacuten muy aisladas en nuestro paiacutes lo que lleva a des-aprovechar con demasiada frecuencia toda una serie de oportunidades educativas cientiacuteficas y tu-riacutesticas que se generan con la apertura de infraes-tructuras lineales

Figura 14 Portada del libro Roadside Geology of Arizona Los libros de esta serie pueden encontrarse faacutecilmente en la mayoriacutea de las aacutereas y zonas de servicio relacionadas con el transporte por carre-tera de Estados Unidos

El coste econoacutemico que supondriacutea la adecuacioacuten de estos espacios podriacutea ser miacutenimo pues en muchos casos bastariacutea con un pequentildeo aparcamiento y un panel explicativo Una recomendacioacuten esencial a la hora de facilitar el acceso a tales lugares y permitir asiacute un posible aprovechamiento lsquoculturalrsquo de estas exposiciones es la de garantizar la seguridad de las personas que puedan examinar los afloramien-tos lo cual deberiacutea ser primordial A modo de co-mentario final sobre la relacioacuten entre las carreteras y los lugares de intereacutes geoloacutegico y geomorfoloacutegi-co merece la pena destacar la iniciativa Roadside

permeables mediante alguno de los muacuteltiples siste-mas existentes (como tubos perforados) o mediante el uso de vegetacioacuten que cumpla la misma funcioacuten lo cual estaacute menos ensayado

Otra praacutectica beneficiosa consiste en aumentar la rugosidad de los desmontes Pero mientras que en demasiados paiacuteses incluido Espantildea auacuten se rei-vindica la construccioacuten de taludes con apariencia lisa que otorguen una (falsa) impresioacuten de lsquobuen acabadorsquo y de un trabajo lsquobien hechorsquo se puede citar que nada menos que en 1978 Wright y otros autores alertaban categoacutericamente sobre esa praacutec-tica perjudicial la cual suele conducir a fallos en el establecimiento de la vegetacioacuten Seguacuten sentildealan Wright et al (1978) las superficies rugosas otorgan una apariencia lsquofearsquo al profano pero favorecen la infiltracioacuten de agua y ayudan a recolectar semillas y nutrientes lo que acelera el establecimiento de la vegetacioacuten y por consiguiente disminuye la emi-sioacuten de aguas y sedimentos a la red de drenaje Un trabajo mucho maacutes reciente (Petersen et al 2004) tambieacuten pone de manifiesto coacutemo los lechos rugo-sos favorecen significativamente el establecimiento de la vegetacioacuten

Este aspecto revela una constante contradiccioacuten o una falta de claridad de objetivos a la hora de aco-meter muchos proyectos de restauracioacuten en los que no estaacute claro desde el principio el aspecto y funcioacuten que debe tener un talud de una infraestructura li-neal Las posturas y enfoques que van desde una aproximacioacuten meramente esteacutetica (proporcionar la maacutes agradable experiencia visual para el conductor) hasta otra maacutes ecoloacutegica como la que se propone en este manual no han logrado una conciliacioacuten En esta discusioacuten no habriacutea que obviar que una mayor funcionalidad ecoloacutegica tiene unas mayores posibili-dades de integracioacuten visual

La reduccioacuten de la escorrentiacutea y el incremento de la infiltracioacuten mediante procesos de descompacta-cioacuten o aumento de la rugosidad aparecen descritos como medidas efectivas en trabajos como Gray y Sotir (1996) o Hogan y Drake (2009)

Otras medidas de lsquosentido comuacutenrsquo pero que la di-naacutemica de las obras puede dificultar consisten en planificar las actividades de construccioacuten y restau-racioacuten en funcioacuten de la meteorologiacutea del lugar de modo que se minimicen los procesos erosivos y en reducir el tiempo de exposicioacuten entre la construc-cioacuten y la restauracioacuten de desmontes y terraplenes de manera que se eviten o minimicen los procesos erosivos (Figura 15)

Figura 15 Erosioacuten hiacutedrica muy severa en terraplenes de una au-toviacutea La paralizacioacuten de las obras impidioacute el extendido de tierra vegetal y la revegetacioacuten durante un largo periodo de tiempo (Foto JF Martiacuten Duque)

3 Correccioacuten de los efectos off-site

La adopcioacuten de un enfoque o aproximacioacuten ecoloacutegi-ca que permita minimizar muchos de los efectos am-bientales maacutes habituales que tiene la construccioacuten de carreteras y ferrocarriles deberiacutea partir de un anaacute-lisis y comprensioacuten de la dinaacutemica geomorfoloacutegica e hidroloacutegica que tiene el territorio sobre el que se impone la infraestructura En el caso de la hidrolo-giacutea las estimaciones de voluacutemenes de escorrentiacutea y de sus caudales punta aunque imprescindibles para disentildear los drenajes deberiacutean completarse con anaacutelisis sobre su capacidad de erosioacuten transporte y sedimentacioacuten Una comprensioacuten y anticipacioacuten de los factores geomorfoloacutegicos e hidroloacutegicos implica-dos evitariacutean muchas de las habituales letaniacuteas de problemas que surgen tras la fase de construccioacuten

Para la correccioacuten de los efectos geomorfoloacutegicos e hidroloacutegicos off-site la experiencia y la literatura destacan los muacuteltiples beneficios que tiene aumen-tar la lsquopermeabilidadrsquo hidroloacutegica y territorial de las infraestructuras (por ejemplo mediante la construc-cioacuten de viaductos) Un caso interesante lo constitu-yen toda una serie de proyectos destinados a mejo-rar la permeabilidad de la autoviacutea AP-7 frente a las avenidas

Se deberiacutea asimismo evitar incrementar excesi-vamente el aacuterea de las cuencas hidrograacuteficas que drenan hacia los distintos colectores que atraviesan las infraestructuras impidiendo en la medida de lo posible la desviacioacuten de escorrentiacutea desde unas cuencas hidrograacuteficas a otras Tambieacuten se deberiacutea limitar la distancia entre los sistemas de cunetas y

Geology Series Esta iniciativa procedente de nue-vo de Estados Unidos consiste en una serie de libros editados para cada estado (Figura 14) en los que se explican e interpretan paisajes actuales y pasados sobre la base de lugares de intereacutes si-tuados lsquoal lado de las carreterasrsquo Las carreteras se convierten asiacute en el elemento estructurante y organizador de los contenidos

2 Correccioacuten de los efectos on-site

A diferencia de la restauracioacuten de otros espacios en los que ha habido una modificacioacuten simultaacutenea del sustrato del suelo y de la vegetacioacuten (por ejemplo mineriacutea) en los taludes de las infraestructuras linea-les no es posible la reconstruccioacuten de una nueva topografiacutea lo cual impone toda una serie de limi-taciones de primer orden a la restauracioacuten En todo caso siacute que es posible efectuar un remodelado y suavizado de los perfiles rectiliacuteneos

Pero lo cierto es que en un contexto lsquoglobalrsquo ape-nas se llevan a cabo variaciones morfoloacutegicas de los taludes disentildeados con criterios geoteacutecnicos de modo que el principal objetivo de la restauracioacuten va dirigido a revegetar las superficies directamente resultantes de la construccioacuten de taludes Todo ello a pesar de que como ya se ha comentado existan demasiados ejemplos de fallos en intentos de re-vegetacioacuten de estos espacios sobre todo en des-montes sobre rocas no consolidadas bajo climas mediterraacuteneos semiaacuteridos

Para prevenir efectos geomorfoloacutegicos e hidroloacutegi-cos severos en los propios taludes de las infra-estructuras lineales la literatura recoge como una buena praacutectica ciertamente esencial evitar la en-trada de escorrentiacutea exterior (run-on) hacia el talud Todo ello mediante medidas como la construccioacuten de cunetas perimetrales efectivas (cut-off drains) Sin embargo una vez que el flujo se concentra en estas cunetas el potencial erosivo resultante de liberar dicha escorrentiacutea (y el de infiltracioacuten si no estaacuten pavimentadas) se incrementa considerable-mente Por este motivo su conduccioacuten hacia el sistema de drenajes y cunetas cuando el disentildeo lo recomiende deberiacutea realizarse mediante los dis-tintos tipos de bajantes que estaacuten disentildeados para disipar la energiacutea

La prevencioacuten de los efectos derivados de la existen-cia de surgencias en los desmontes puede acome-terse desde meacutetodos tradicionales y contrastados tales como drenar de manera controlada los niveles

Lugar de intereacutes geoloacutegico excepcional (cabalga-miento o falla inversa) expuesto como consecuencia de unas obras de ampliacioacuten de la carretera N-110 en el borde norte del Sistema Central (proximidades de la localidad de Villacastiacuten) El material grisaacuteceo situado sobre la liacutenea oblicua (falla) son granitoides del Paleozoico que lsquocabalganrsquo sobre los materiales anaranjados y ocres correspondientes a arenas arcoacutesicas del Cenozoico (Foto Alberto Carrera) En Diacuteez y Martiacuten Duque (2005)

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alcantarillas con el objetivo de reducir la longitud de recorrido de la escorrentiacutea

Otras medidas efectivas consisten en dirigir el desaguumle de los drenajes hacia zonas con una bue-na cubierta vegetal bien existente o bien creada mediante canales revegetados O bien canalizar las emisiones de escorrentiacutea y sedimentos que

atraviesan o proceden de las infraestructuras hasta balsas de decantacioacuten o retencioacuten temporal tanques de tormentas diques de tierra o gaviones o simi-lares a la salida de los drenajes (Figura 16) Op-cionalmente estas estructuras pueden incorporar un desaguumle controlado y gradual de la escorrentiacutea todo ello con el objetivo de laminar picos de avenidas y de evitar posibles roturas o colmataciones raacutepidas

El siguiente caso (descrito en detalle en Diacuteez Herrero et al 2009) puede servir para ilustrar la dicotomiacutea permanente que existe entre una forma convencional de abordar el tratamiento de taludes de carreteras (el ya referido lsquobusiness as usualrsquo) y la existencia de otras posibilidades apenas exploradas que podriacutean conseguir solucionar problemas de manera maacutes efi-ciente y con una mayor integracioacuten ambiental

La carretera SG-312 denominada localmente lsquoCuesta de los Hoyosrsquo consiste en una viacutea de doble carril que bordea la ciudad histoacuterica de Segovia por el suroeste constituyendo una de las principales viacuteas de comunicacioacuten de su entorno Dicha carretera discurre a modo de escaloacuten entre el fondo de un pequentildeo valle (del arroyo Clamores) y una ladera desarrollada sobre rocas carbonaacuteticas

Las obras de construccioacuten de esta carretera y de sus sucesivos arreglos y ensanches han conforma-do un escarpe continuo en uno de las maacutergenes de la viacutea Este escarpe casi vertical ha favorecido la ocurrencia de sucesivos procesos de caiacutedas des-prendimientos vuelcos y colapsos de rocas cuya interferencia con el traacutefico rodado ha sido muy fre-cuente De hecho ha existido aquiacute desde antiguo la caracteriacutestica sentildeal de traacutefico que indica lsquopeligro por desprendimientosrsquo En el antildeo 2003 la circulacioacuten por esta carretera estuvo cortada debido a las obras de estabilizacioacuten de los taludes como consecuencia de dos importantes desprendimientos de rocas ocurri-dos los meses de mayo y agosto de ese mismo antildeo uno de los cuales movilizoacute maacutes de 20 toneladas de rocas Tras ese desprendimiento y cuando apenas habiacutean transcurrido 25 diacuteas de su apertura la carre-tera tuvo que ser cortada de nuevo el 31 de agosto de 2003 tras otro desprendimiento

La solucioacuten de estabilizacioacuten consistioacute en aplicar a todo el cortado rocoso distintos tipos de malla talud (Figura 17) cuyo importe total fue de 900000 euros Si bien la medida correctora puede ser efectiva para pequentildeos desprendimientos no lo es para otros de mayor entidad (puesto que la solucioacuten no logra es-tabilizar grandes bloques inestables como tambieacuten puede verse en la Figura 17) Al mismo tiempo se echa en falta aquiacute un tratamiento maacutes adaptado al entorno tan singular en el que se integra la viacutea con vistas reciacuteprocas entre la carretera y el borde suroeste de la ciudad histoacuterica (que es Patrimonio de la Humanidad desde 1985) La singularidad de

este enclave se completa por la circunstancia de que el talud objeto de tratamiento incluye cuevas apro-vechadas como necroacutepolis que fueron el cemente-rio judiacuteo de la ciudad De hecho la Fiscaliacutea de la Audiencia Provincial de Segovia llegoacute a incoar dili-gencias informativas para tener conocimiento de la posible afeccioacuten al medio ambiente de estas obras Desde nuestro punto de vista una accioacuten lsquocorrec-torarsquo maacutes sensible y ecoloacutegica maacutes particularizada y con un enfoque en el que hubiera predominado la integracioacuten ambiental de la obra en su entorno podriacutea haber propuesto al menos en algunos sec-tores la retirada y desmonte de todos aquellos sec-tores del talud que mostrasen mayor inestabilidad eliminando el riesgo pero dejando al descubierto afloramientos naturales de roca lsquosanarsquo (en la liacutenea de la solucioacuten lsquotalud Royalrsquo que se expondraacute maacutes adelante) En este sentido la exposicioacuten de super-ficies coincidentes con diaclasas existentes habriacutea favorecido un aspecto maacutes lsquoenvejecidorsquo de manera natural del desmonte conservando asiacute el caraacutecter singular de este entorno

Figura 17 Tratamiento con malla-talud efectuado en la Cuesta de Los Hoyos (Segovia) (Foto Andreacutes Diacuteez)

Figura 16 Izquierda ejemplo de una balsa de decantacioacuten de sedimentos y de contencioacuten de vertidos accidentales conectada al sistema de drenaje de la autopista Radial 4 (Madrid) En la imagen pueden observarse ademaacutes de la infraestructura lineal la bajante desde el terrapleacuten la cuneta que conduce la escorrentiacutea y los sedimentos a la balsa el canal de entrada la balsa y el vertedero de la balsa a la red fluvial del entorno (arroyo Salinas) Derecha detalle de la misma balsa en el que se aprecian mejor alguno de los elementos que la componen el canal de entrada la reja de desbaste la balsa el canal de vertido y el arroyo Salinas (al fondo) (Fotos Javier Martiacutenez de Castilla Colomer Ferrovial-Agromaacuten SA)

La literatura especializada propone evitar cons-truir cunetas con un disentildeo convencional con perfil lsquoen Vrsquo y construirlas con fondo plano so-bre todo si no estaacuten pavimentadas ya que las primeras concentran y aceleran el flujo de agua y favorecen la erosioacuten bien en la propia cuneta (si no estaacute cementada) bien cuando se libera la es-correntiacutea hacia fuera del aacutembito de la infraestruc-tura Otras recomendaciones auacuten maacutes completas incluiriacutean disentildear las cunetas sobre la base de principios de la geomorfologiacutea fluvial (Bugosh

2006) y utilizar pavimentos permeables siempre previendo sus posibles efectos

Como siacutentesis podriacutea decirse que habriacutea que reducir al maacuteximo posible la intercepcioacuten concentracioacuten y desviacioacuten de la escorrentiacutea producida por la cons-truccioacuten de carreteras Ademaacutes la escorrentiacutea eva-cuada deberiacutea distribuirse espacial y temporalmente buscando siempre incrementar la infiltracioacuten y evi-tando dirigir los desaguumles hacia laderas sin protec-cioacuten frente a la erosioacuten hiacutedrica

VI UN EJEMPLO ILUSTRATIVO LAS LIMITACIONES DE LAS SOLUCIONES lsquoESTAacuteNDARrsquo

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La confirmacioacuten del fracaso de una solucioacuten que no estaacute adaptada a paliar la causa del problema se ha puesto de manifiesto con la ocurrencia de nuevos desprendimientos recientes ocurridos el 22 de no-viembre de 2010 que han motivado un nuevo cierre de la viacutea

Muy cerca de la citada carretera SG-312 aparece otro ejemplo de lsquoestabilizacioacutenrsquo de un escarpe rocoso que ilustra incluso mucho maacutes claramente que el ante-rior la dificultad para adoptar otro tipo de solucio-nes que no sean las rutinarias

En este caso se trata de unos cantiles rocosos de la misma naturaleza que los recieacuten descritos que a modo de anfiteatro natural circundan el Santuario de La Fuencisla (denominadas Pentildeas Grajeras) tam-bieacuten en el entorno de la ciudad histoacuterica de Segovia Estos escarpes han sufrido al menos cinco despren-dimientos de gran entidad en los uacuteltimos 500 antildeos (Diacuteez Herrero et al 2009) lo que indica un periodo de retorno de un evento de gran magnitud de en torno a 100 antildeos El suceso maacutes reciente tuvo lugar la madrugada del 7 de abril de 2005 cuando al me-nos dos mil toneladas de roca se desprendieron de las Pentildeas Grajeras destruyendo el edificio anexo al Santuario de la Fuencisla e hiriendo a tres religiosas que se encontraban dentro

Dentro de estas mismas Pentildeas Grajeras toda una serie de desprendimientos de menor entidad afectan tambieacuten de modo recurrente a la carretera que dis-curre a su pie (carretera SG-310 o carretera de Areacute-valo) Asiacute unos pocos diacuteas despueacutes del suceso del 7 de abril de 2005 se produjo un nuevo desprendi-miento de rocas en una zona muy proacutexima En este caso las rocas caiacutedas alcanzaron a un vehiacuteculo que pasaba por la carretera en ese momento Con poste-rioridad otros desprendimientos (ocurridos el 13 de mayo de 2008 y el 20 de julio de 2008) obligaron de nuevo a cortar algunas zonas a la circulacioacuten de personas y vehiacuteculos

En este caso se puede ser auacuten mucho maacutes criacutetico con la actuacioacuten de estabilizacioacuten y restauracioacuten que se produjo sobre las Pentildeas Grajeras con poste-rioridad al gran desprendimiento del 7 de abril de 2005 Tras el desprendimiento un gran bloque que-doacute semisuspendido separado del macizo rocoso

Tabla 1 Efectos de las diferentes soluciones teacutecnicas de actuacioacuten en Pentildeas Grajeras (Segovia)

EFECTOS QUE HUBIERA TENIDO DESMONTAR EL GRAN BLOQUE INESTABLE

EFECTOS DE LA INTERVENCIOacuteN REALIZADA BULONADO + GUNITA

Apariencia natural manteniendo la calidad visual Hubiera quedado un escarpe rocoso poco meteorizado que se habriacutea integrado progresivamente en el conjunto del cortado

Peacuterdida de valores esteacuteticos Aspecto artificial de ldquocualquier desmonte de carreterardquo en un entorno de calidad visual muy alta

Hubiera mantenido intactos los valores que hacen de esta localizacioacuten un enclave singular

La singularidad del enclave se mantiene pero se produce una peacuterdida clara del caraacutecter del lugar

Se habriacutean mantenido los procesos geomorfoloacutegicos hidroloacutegicos y ecoloacutegicos (mantenimiento del haacutebitat natural para distintas especies rupiacutecolas y de la biodiversidadhellip)

No mantiene los procesos geomorfoloacutegicos hidroloacutegicos y ecoloacutegicos Sistema artificial sin flujos naturales ni haacutebitats (gunitado)

Hubiera sido una solucioacuten resiliente y estable No es una solucioacuten ni resiliente ni estable

No hubiera requerido mantenimiento (mucha mayor estabilidad) Maacutes barato

Requiere mantenimiento (el problema queda lsquocongeladorsquo) Maacutes caro

VII EJEMPLOS DE EacuteXITO (O DE COacuteMO SERAacute EL FUTURO)

por una grieta de 6 cm de anchura y de 15 m de longitud con riesgo de afectar al Santuario Tras esa alarma se produjo una intervencioacuten inmediata que lsquobulonoacutersquo el bloque inestable al macizo rocoso realizaacutendose con posterioridad un tratamiento con mortero proyectado (gunitado) En nuestra opinioacuten hubiera sido mucho maacutes conveniente proceder a desmontar el gran bloque inestable lo que hubiera garantizado una gran estabilidad de la zona duran-te muchos antildeos Y hubiera permitido el afloramien-to de roca natural asegurando el mantenimiento de la calidad ecoloacutegica y visual del lugar Como miacute-nimo esta posibilidad deberiacutea haberse contempla-do como alternativa dada su viabilidad y dado que los requerimientos teacutecnicos (instalacioacuten de gruacutea) y de riesgo asumido eran similares en los dos casos Sin embargo en su lugar se procedioacute a realizar una actuacioacuten lsquoconvencionalrsquo (Figura 18) como las que se aplican en cualquier talud de carretera en un entorno de gran valor natural histoacuterico y religioso y sin duda en el paisaje maacutes sobresaliente del entorno de la ciudad de Segovia No en vano esta zona forma parte de las vistas panoraacutemicas de ma-yor calidad que se obtienen desde el mirador del Alcaacutezar vistas que se encuentran protegidas por una normativa pionera en nuestro paiacutes (del antildeo 1941) a este respecto La Tabla 1 trata de compa-rar los efectos que hubiera tenido la alternativa de desmontar el bloque inestable con respecto a la solucioacuten finalmente adoptada

Figura 18 Detalle del bulonado y gunitado elegido como solucioacuten teacutecnica para la fijacioacuten de la placa de roca contigua a la zona des-prendida (Foto Andreacutes Diacuteez)

El hecho de que la praacutectica totalidad de los taludes de infraestructuras lineales se construyan actualmente si-guiendo casi siempre los mismos meacutetodos no quiere decir que no existan ya otras propuestas y realidades que constituyen ejemplos exitosos que apuntan hacia otra manera de hacer las cosas Estas experiencias auacuten muy minoritarias y tildadas de lsquopoco realistasrsquo o lsquomuy carasrsquo (lo cual contraargumentaremos) muestran lo que seraacuten probablemente los procedimientos de disentildeo y construccioacuten de la mayor parte de los taludes de infraestructuras lineales en el futuro

1 Maacutexima estabilidad e integracioacuten ambiental de desmontes rocosos el talud Royalreg

La praacutectica constructiva actual de desmontes de in-fraestructuras lineales sobre macizos rocosos puede considerarse bastante lsquotraumaacuteticarsquo para el paisaje afec-tado dado que lsquobiselarsquo por igual todo tipo de rocas y formas del terreno Los nuevos desmontes suelen tener un gran impacto visual y ecoloacutegico al tiempo que son fuente de todo tipo de inestabilidades Fren-te a esta manera ndashcasi uacutenicandash de observar la realidad de estos espacios el talud Royalreg (httpwwwgenie-geologiquefr) creado y patentado por el geoacutelogo franceacutes Paul Royal propone un meacutetodo que consigue

simultaacuteneamente otorgar la maacutexima estabilidad a los desmontes rocosos de infraestructuras lineales y con-seguir una extraordinaria integracioacuten visual y ecoloacutegica

El meacutetodo consiste en analizar la evolucioacuten geomor-foloacutegica que sufren las mismas rocas objeto de corte en laderas de paisajes del entorno que se consideran referentes e lsquoimprimirrsquo a los desmontes construidos dicha evolucioacuten desde el principio En el fondo el razonamiento es simple y realiza la si-guiente interpretacioacuten si se construyera un desmon-te rocoso sobre una localizacioacuten determinada y no se interviniera sobre eacutel (estabilizaacutendolo) durante un periodo de tiempo largo este sufririacutea una evolucioacuten geomorfoloacutegica La interpretacioacuten de esa evolucioacuten no es imposible sino perfectamente factible a partir del anaacutelisis de los referentes ya citados Sobre esta base la solucioacuten Royal lsquocomprimersquo esa evolucioacuten durante la fase constructiva y otorga al desmonte rocoso desde el principio la evolucioacuten que sufririacutea a lo largo de un periodo de tiempo dilatado El re-sultado es un talud muy estable visualmente muy atractivo y con las maacuteximas ventajas ecoloacutegicas

En siacutentesis el meacutetodo consiste en a) identificar las principales liacuteneas de discontinuidad del macizo rocoso (fallas diaclasas planos de estratificacioacuten planos de esquistosidadhellip) las cuales determinan

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la inestabilidad b) comprender los patrones de esa inestabilidad como tipo de proceso (caiacutedas o desli-zamientoshellip) y condiciones de ocurrencia c) conocer cuaacutel es la respuesta diferencial (erosiva o evolutiva) de las distintas rocas que componen un talud (por ejemplo una roca masiva puede soportar un talud vertical pero un estrato de una roca sedimentaria intercalada no) e incorporar dicha respuesta en el disentildeo

Los taludes Royal se construyen a partir de vola-duras muy dirigidas o controladas (adaptadas a la estructura de los distintos tipos de rocas) Este pro-ceso se completa mediante el desmonte particulari-zado de bloques inestables con retroexcavadora y tambieacuten de manera manual (Figura 19) El enfoque convencional interpreta que el procedimiento Royal es lsquomucho maacutes carorsquo que los meacutetodos actuales de construir desmontes pero desde aquiacute nos atrevemos a afirmar que este meacutetodo es lsquomucho maacutes baratorsquo si consideramos el ahorro que se genera con el meacuteto-do Royal tanto en costes de medidas correctoras de tipo estructural (cunetas bulones mallas empleo de gunitahellip) como en costes de mantenimiento al que estaacuten sujetos la mayoriacutea de los taludes rocosos que son afectados por infraestructuras lineales (veacutea-se a este respecto el ejemplo descrito en el apartado VI de este capiacutetulo)

Figura 19 Aspecto de un talud Royal en construccioacuten en el que se estaacuten eliminando los uacuteltimos bloques inestables de forma manual Carretera RN57 en Luxeuil Francia (Foto Paul Royal)

Como ya se ha indicado ademaacutes del beneficio eco-noacutemico a largo plazo los taludes Royal ofrecen enor-mes ventajas paisajiacutesticas y ecoloacutegicas

1 Constituyen teselas de paisaje visualmente atrac-tivas perfectamente integradas en el entorno Ello es asiacute porque ofrecen una configuracioacuten geomorfoloacutegica que es convergente (lsquonaturalrsquo coherente) con la del entorno (Figura 20) Tam-bieacuten y este destalle es esencial porque al dejar

al descubierto las discontinuidades naturales de la roca estas ya tienen un determinado grado de meteorizacioacuten lo que consigue el admirable ob-jetivo de construir un talud nuevo que ya parece lsquomuy viejorsquo por estar meteorizado (Figura 21)

Figura 20 Aspecto de un talud Royal en la carretera A20 Cahors (Francia) (Foto Paul Royal)

Figura 21 Aspecto de un talud Royal en la carretera RD 105 Loire (Francia) en el que se observa la exposicioacuten de superficies ya meteorizadas en un desmonte de reciente construccioacuten (Foto Paul Royal)

2 Se logra establecer una continuidad entre la geo-logiacutea y la geomorfologiacutea (es decir la estructura del paisaje) del entorno y los desmontes cons-truidos al evitar contactos bruscos y artificiales entre ambos sistemas

3 La configuracioacuten del desmonte ofrece las mayores ventajas ecoloacutegicas posibles al no incluir elemen-tos artificiales A su vez se maximiza la superficie total expuesta dado que son taludes lsquotridimen-sionalesrsquo que incrementan considerablemente su superficie final Auacuten maacutes como existen distintas orientaciones y pendientes se construye la base

para la existencia de una gran diversidad de haacutebi-tats Finalmente dada la ausencia de elementos artificiales y su gran estabilidad su colonizacioacuten natural por distintas especies de flora y fauna es raacutepida y espontaacutenea

El meacutetodo Royal cuenta con una ampliacutesima gama de ejemplos construidos en Francia (accesibles a traveacutes de httpwwwgeniegeologiquefr) y a fecha de 2010 con dos ejemplos en Cataluntildea carretera C-16 DrsquoAbrera a Bellver de Cerdanya y carretera C-15 en el tramo de Vilanova i la Gel-truacute ndash Vilafranca del Penedeacutes (Figura 22) Estos ejemplos son el resultado de iniciativas de gran intereacutes que llevan antildeos buscando las mejores soluciones disponibles para minimizar el impacto de las infraestructuras viarias sobre el territorio (EGAM SL 2000)

Figura 22 Aspecto de un talud Royal en construccioacuten en una autopista que atraviesa el macizo del Garraf (Cataluntildea) La Declaracioacuten de Impacto Ambiental de esta autopista puso como condicioacuten la construccioacuten de este tipo de talud en esta zona Noacutetese coacutemo las rocas de la izquierda de la imagen rocas de falla maacutes erosionables) son remodeladas formando ya una pequentildea depresioacuten en el desmonte alcanzando desde el principio la que seraacute su maacutes que previsible evolucioacuten tal y como ocurre en las laderas lsquonaturalesrsquo del entorno (Foto JF Martiacuten Duque)

2 A la buacutesqueda de la maacutexima estabilidad e integracioacuten ambiental de desmontes sobre rocas no consolidadas remodelados topograacuteficos y aumento de la estabilidad fiacutesica del sustrato

La construccioacuten de desmontes sobre rocas no con-solidadas (rocas lsquoblandasrsquo) no cuenta con un meacuteto-do de disentildeo y construccioacuten tan soacutelido y coherente como el talud Royal si bien existen iniciativas que apuntan en esa direccioacuten

En primer lugar el Departamento de Transportes del estado de California en Estados Unidos (Caltrans) sobre la base de la aproximacioacuten de Schor y Gray (2007) estaacute disentildeando y construyendo desmontes a partir de remodelados geomorfoloacutegicos que buscan una mayor estabilidad e integracioacuten ambiental en el entorno (Figura 23)

Figura 23 Comparativa entre un remodelado rectiliacuteneo del terreno y otro que se adapta a las formas del paisaje en el entorno de una infrae-structura lineal El segundo aumenta la superficie afectada pero puede tener seguacuten el escenario mayores ventajas en teacuterminos de estabilidad e integracioacuten ambiental Imagen accesible a traveacutes de httpwwwdotcagovhqLandArchecearthworkcontour_grading_roundinghtm

Como ya se ha sentildealado a lo largo de todo el ca-piacutetulo en los desmontes de rocas no consolidadas construidos en ambientes semiaacuteridos la erosioacuten hiacutedrica constituye un problema central que de-termina la estabilidad de los desmontes y el eacutexito de las restauraciones En este sentido ademaacutes de consolidar y articular como meacutetodo las posibilida-des de remodelados topograacuteficos sobre la base de los ejemplos expuestos un equipo de inves-tigacioacuten formado por personal de las Facultades de Geologiacutea y Biologiacutea de la Universidad Complu-tense de Madrid (UCM) y del servicio de I+D+i de la empresa constructora Obrascoacuten Huarte Laiacuten SA (OHL) estaacute desarrollando soluciones para reducir la erosioacuten hiacutedrica en estos escenarios mediante el manejo de procesos que intervienen en las pro-piedades fiacutesicas de los sustratos de los desmon-tes (descompactacioacuten aumento de la rugosidad estudio de la organizacioacuten microtopograacutefica de la escorrentiacutea y posibilidades de control de la mis-ma sin elementos estructuraleshellip) (Barbero et al 2009a 2009b)

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VIII HACIA UN CAMBIO DE PARADIGMA

1 Imponer la infraestructura al territorio en lugar de adaptarla o integrarla en el mismo en la medida que los condicionantes teacutecnicos y eco-noacutemicos de cada proyecto lo permitan

2 Realizar obras en carreteras que discurren por paisajes rurales y naturales de gran valor eco-loacutegico y paisajiacutestico que bien son innecesarias bien se realizan desde una perspectiva que no considera el caraacutecter del territorio transformado Para evitar estos errores se podriacutea adoptar el enfoque que tienen para este tipo de viacuteas los paiacuteses del norte de Europa y de Norteameacuterica

3 Aplicar soluciones estaacutendar para estabilizar ta-ludes sin considerar la calidad o fragilidad del entorno en el que se realiza dicha actuacioacuten

4 No identificar conservar habilitar y promover la divulgacioacuten e interpretacioacuten de puntos luga-res y estructuras singulares de intereacutes geoloacute-gico y geomorfoloacutegico que quedan expuestos con frecuencia como consecuencia de la cons-truccioacuten de infraestructuras lineales

5 No considerar la erosioacuten hiacutedrica como un factor de inestabilidad de primer orden en taludes que tienen materiales no compactados y no incluir por tanto dicho factor en el disentildeo de los taludes

6 No prever los efectos que tendraacuten los lsquocortesrsquo realizados en el terreno en los procesos de construccioacuten de infraestructuras sobre posi-bles niveles permeables y saturados del sub-suelo ni las consecuencias que se derivaraacuten sobre la inestabilidad de los taludes

7 No considerar el efecto que introduce la varia-bilidad litoloacutegica dentro de un mismo talud a la hora de abordar su estabilizacioacuten o restau-racioacuten

8 Realizar plantaciones de arbustos y matorrales en desmontes muy susceptibles a la erosioacuten hiacutedrica lo que no consigue reducir la erosioacuten sino al contrario la favorece debido al descen-so del nivel de base local que introducen en el talud los procesos de ahoyado

Las consideraciones y ejemplos descritos tratan de ilustrar el necesario cambio de paradigma que deberiacutea ocurrir con respecto al manejo y control de la dinaacutemica geomorfoloacutegica e hidroloacutegica en el entorno de las infraestructuras lineales Ese cambio deberiacutea afectar a todas las fases disentildeo construccioacuten medias correctoras y de restaura-cioacuten y requeririacutea tratar de lsquomanejarrsquo y controlar las dinaacutemicas geomorfoloacutegica e hidroloacutegica de forma maacutes adaptativa y no basada exclusivamente en medidas estructurales convencionales Ello permi-tiriacutea lograr soluciones que combinen de manera maacutes eficiente seguridad y beneficios ambientales y econoacutemicos

A modo de ejemplo la adopcioacuten de enfoques maacutes lsquoadaptativosrsquo en taludes sobre rocas no consolida-das en ambientes mediterraacuteneos semiaacuteridos podriacutea incrementar significativamente el eacutexito de los pro-cesos de revegetacioacuten y de restauracioacuten ecoloacutegica y disminuir los costes de mantenimiento La principal mejora derivada de tratar de comprender y manejar esos procesos geomorfoloacutegicos e hidroloacutegicos des-de un enfoque ecoloacutegico se debe a la reduccioacuten en

la merma de bienes y servicios ambientales en el entorno de las infraestructuras Se podriacutea conseguir asiacute disminuir las peacuterdidas de suelo por distintos procesos erosivos (en algunos casos severos tales como formacioacuten de barrancos y caacutercavas) asiacute como por fenoacutemenos de sedimentacioacuten (por ejemplo en forma de conos aluviales) Todo ello impediriacutea a su vez la peacuterdida de suelos productivos desde un punto de vista agriacutecola forestal y ecoloacutegico Y se reduciriacutean al miacutenimo las emisiones de sedimentos a las redes fluviales proacuteximas un problema ambiental muy serio que pasa inadvertido en Espantildea

Respecto a los desmontes rocosos el meacutetodo del talud Royal sintetiza de manera magistral el enfoque adaptativo y el cambio de paradigma que aquiacute se defiende

Prestar atencioacuten al intereacutes cientiacutefico educativo y turiacutestico de determinadas exposiciones (afloramien-tos) generadas por la apertura de infraestructuras lineales podriacutea completar un abanico de medidas encaminadas a incrementar la integracioacuten ambiental de las infraestructuras lineales en su entorno

IX PREGUNTAS CLAVE

iquestCoacutemosepuedecumplirlamejorintegracioacutengeomorfoloacutegicaehidroloacutegicaposibledelainfraestructura(formulacioacutendedistintasalternativasodisentildeodelaalternativafinal)

Realizar anaacutelisis geoloacutegicos geomorfoloacutegicos e hidroloacutegicos regionales y a escala de paisaje que permitan adaptar la infraestructura al territorio minimizando los riesgos naturales y los impactos

iquestCoacutemosepuedemaximizarlalsquopermeabilidadrsquohidroloacutegicadelainfraestructurasobreelterritoriominimizandosuslsquoefectosbarrerarsquo

Explorar todas las posibilidades de disentildeo y cons-truccioacuten que sean maacutes eficientes a la hora de fa-vorecer la conectividad hidroloacutegica a ambos lados de la infraestructura (viaductos drenajeshellip)

iquestEsviableteacutecnicayeconoacutemicamentemodificarlosperfilestopograacuteficosrectiliacuteneosdelostaludesporotrosgeomorfoloacutegicamentemaacutesestablesenesaslocalizaciones

Evaluar la posibilidad de introducir variaciones a los disentildeos de taludes rectiliacuteneos si se estima que otras morfologiacuteas teacutecnica y econoacutemicamente via-bles son maacutes estables en el largo plazo

iquestCuaacutelessonlosfactoresabioacuteticosquelimitanlaestabilidadgeomorfoloacutegicadelostaludesobjetodeactuacioacutenasiacutecomoelestablecimientoydesarrollodesuelosyvegetacioacuteniquestCoacutemosepuedenlsquomanejarrsquodemaneraexpertaydesdeunenfoqueecoloacutegicodichosfactores

Realizar un anaacutelisis de esos factores a escala lo-cal y utilizar la experiencia acumulada por el esta-do del conocimiento actual para su manejo desde una oacuteptica ecoloacutegica En funcioacuten de las condicio-nes climaacuteticas y particulares ese manejo puede ir dirigido a aumentar la infiltracioacuten de agua (a partir de medidas como el aumento de la rugosi-dad o la descompactacioacuten) para evitar la erosioacuten hiacutedrica o a todo lo contrario es decir a favorecer el drenaje para evitar una saturacioacuten del subsue-lo que provoque movimientos gravitacionales

X ERRORES HABITUALES

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Ecohidrologiacutea erosioacuten hiacutedrica y dinaacutemica de la vegetacioacuten en laderas artificiales

Joseacute Manuel Nicolau Tiscar Espigares Mariano Moreno de las Heras y Luis Merino-Martiacuten

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CAPIacuteTULO 3 Ecohidrologiacutea erosioacuten hiacutedrica y dinaacutemica de la vegetacioacuten en laderas artificiales

Joseacute Manuel Nicolau Tiscar Espigares Mariano Moreno de las Heras y Luis Merino-Martiacuten

I INTRODUCCIOacuteN

Como se ha sentildealado en varios apartados de este manual la inestabilidad geomorfoloacutegica tiene efec-tos negativos sobre el eacutexito de la restauracioacuten de las laderas construidas (on site effects) En efecto la erosioacuten hiacutedrica condiciona los procesos ecoloacutegicos que conducen al establecimiento y desarrollo de la vegetacioacuten asiacute como a la edafogeacutenesis (Kapolka y Dollhopf 2001 Nicolau 2002) Se ha indicado que el aacutembito clave para conseguir una restauracioacuten efec-tiva es el suelo de manera que seguacuten Bradshaw (1988) el objetivo de una restauracioacuten deberiacutea ser alcanzar un suelo bioloacutegicamente funcional Sin em-bargo Whisenant et al (1995) advierten de que en muchos casos es un objetivo previo garantizar la estabilidad de los recursos edaacuteficos que son ame-nazados por los procesos erosivos Los mecanis-mos por los cuales la erosioacuten hiacutedrica afecta a los procesos ecoloacutegicos han sido abordados desde la joven disciplina de la ecohidrologiacutea A continuacioacuten se presenta una siacutentesis de los resultados obteni-dos en este campo por el grupo de investigacioacuten de la Universidad de Alcalaacute-Universidad de Zaragoza Estas investigaciones se han efectuado sobre lade-ras derivadas de la restauracioacuten de la mineriacutea de carboacuten a cielo abierto en el ambiente mediterraacuteneo-continental de Teruel Su intereacutes para el caso de las infraestructuras lineales se refiere a la restauracioacuten de los terraplenes pues se trata de materiales ver-tidos aloacutectonos a diferencia de los desmontes de materiales autoacutectonos

Las interacciones entre la escorrentiacutea superficial y diversos procesos ecoloacutegicos han podido ser abor-dadas en el Aacuterea Experimental El Moral (Utrillas Teruel) gracias a la existencia de un conjunto de la-deras construidas de la misma edad y similares ca-racteriacutesticas topograacuteficas edaacuteficas de orientacioacuten y de tratamientos de revegetacioacuten pero diferencia-das por el volumen de escorrentiacutea generado en su cabecera el cual se introduce en ellas circulando ladera abajo (run-on) Ello representa en condicio-nes de campo lo maacutes cercano a un disentildeo experi-mental dirigido a evaluar el efecto del volumen de escorrentiacutea y la erosioacuten hiacutedrica asociada sobre la dinaacutemica de la vegetacioacuten De hecho la entrada de escorrentiacuteas exoacutegenas por la cabecera de las laderas constituye una singularidad de estos sis-temas emergentes que condiciona notablemente

su evolucioacuten ecoloacutegica Estas entradas (run-on) se generan a causa del incorrecto funcionamiento de cunetas superiores o bermas o de la existencia de segmentos superiores de ladera abruptos o con-vexos que actuacutean como aacutereas-fuente de escorrentiacutea La inestabilidad que generan aconseja el maacuteximo control sobre ellas en los proyectos de restauracioacuten (Hancock y Willgoose 2004)

En las laderas artificiales la accioacuten de la escorrentiacutea superficial ndashmovilizando partiacuteculas de suelo y gene-rando geoformas que modifican la microtopografiacuteandashes un fenoacutemeno generalmente previo en el tiempo a la siembra o llegada de propaacutegulos germinacioacuten y establecimiento de la vegetacioacuten Y probablemente es un proceso tambieacuten maacutes dinaacutemico en las prime-ras etapas de la evolucioacuten de los terraplenes

II EVOLUCIOacuteN ECOLOacuteGICA E HIDROLOacuteGICA DE LADERAS ARTIFICIALES

A modo general se han identificado tres tipos de trayectorias de evolucioacuten ecoloacutegica e hidroloacutegica (Moreno de las Heras 2009a Merino-Martiacuten et al 2011) como se indica en la Figura 1 a) laderas con densas redes de regueros continuos en las que la sucesioacuten ecoloacutegica se encuentra bloqueada (arres-ted succession) presentando una escasa implanta-cioacuten vegetal (Figura 1A) b) laderas con regueros dis-continuos y geoformas de sedimentacioacuten en conos y de erosioacuten en interregueros que han desarrollado comunidades vegetales herbaacuteceas cuya distribucioacuten espacial en manchas discontinuas (lsquoclaros y matasrsquo) estaacute asociada a las aacutereas exportadoras e importa-doras de escorrentiacutea y sedimentos (Figuras 1B y 1C) c) laderas sin geoformas previas asociadas a proce-sos de erosioacuten-sedimentacioacuten en las que se produce el establecimiento de matorrales facilitadores (que interaccionan positivamente con otras especies fa-voreciendo su establecimiento y desarrollo) los cua-les controlan el flujo de agua y sedimentos (Figura 1D) Como se sentildeala en la Figura 1 estos tres tipos

de laderas restauradas representan a su vez un gradiente desde el control abioacutetico de los recursos hiacutedricos (por los procesos geomorfoloacutegicos en las laderas tipo A y B) al control bioacutetico que se produce en aquellas laderas colonizadas por matorrales faci-litadores (tipo C)

Para las condiciones de las laderas de El Moral se ha podido establecer que con niveles de cubierta vege-tal inferiores al 30 y tasas de erosioacuten en regueros superiores a 20 t ha-1 antildeo-1 la dinaacutemica del sistema conduciriacutea a un bloqueo de la sucesioacuten ecoloacutegica Con niveles superiores al 50 de cobertura vegetal y tasas de erosioacuten en regueros inferiores a 5 t ha-1 antildeo-1 la dinaacutemica del sistema conduciriacutea hacia una cubierta vegetal continua a partir de la matorraliza-cioacuten En los niveles intermedios (5-20 t ha-1 antildeo-1 y 30-50 de cobertura vegetal) se organiza una cu-bierta vegetal discontinua en un patroacuten de matas y claros subordinado a la dinaacutemica de la escorrentiacutea superficial (Moreno de las Heras 2009a)

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III FUNCIONAMIENTO ECOHIDROLOacuteGICO DE LADERAS DE ESTUDIO

En el caso de las laderas reguerizadas (Figura 2) ha podido establecerse que el principal efecto restric-tivo de la erosioacuten sobre la vegetacioacuten es la dismi-nucioacuten del contenido de humedad edaacutefica a que da lugar la evacuacioacuten eficiente de la escorrentiacutea por parte de los regueros (Moreno de las Heras et al 2011) La intensificacioacuten del deacuteficit hiacutedrico propiciada por la erosioacuten en regueros condiciona notablemente la escasa colonizacioacuten vegetal En concreto se ha comprobado que limita la germinacioacuten de las semi-llas el establecimiento y supervivencia de plaacutentulas y la produccioacuten de semillas de las plantas adultas (Espigares et al 2011)

Los regueros ademaacutes redistribuyen el agua en la la-dera (concentrando la humedad del suelo en la base de los regueros) lo que afecta tambieacuten a la distribu-cioacuten espacial de las plantas Asiacute en las laderas mi-neras de Teruel a partir de densidades de regueros de 060 m m-2 solo una comunidad pauciespeciacutefica de Medicago sativa (alfalfa originariamente introducida en las laderas mediante revegetacioacuten) es capaz de desa-rrollarse concentraacutendose los individuos en los bordes entre los interregueros y los regueros La localizacioacuten espacial de estos individuos no es casual sino que responde a la interaccioacuten entre los patrones de enve-jecimiento y muerte de las plantas con la distribucioacuten espacial de la humedad y los efectos mecaacutenicos de los

flujos de escorrentiacutea En este sentido los bordes entre los regueros y los interregueros representan las aacutereas donde estas plantas pueden minimizar los niveles de estreacutes hiacutedrico (gracias al uso de los recursos hiacutedricos presentes en el entorno de la base de los regueros) evitando a la vez el fuerte impacto mecaacutenico generado por los flujos concentrados de escorrentiacutea que circulan por los regueros Cabe sentildealar que este tipo de pa-troacuten espacial de la vegetacioacuten (dispuesto en pequentildeas manchas paralelas a los flujos de escorrentiacutea) presenta

una gran incapacidad para interceptar y redistribuir los flujos de recursos (agua nutrienteshellip) que circulan por las laderas En estas condiciones las peacuterdidas direc-tas de recursos hiacutedricos de las laderas en forma de escorrentiacutea superficial representan maacutes del 20 de la precipitacioacuten anual (Moreno de las Heras et al 2010)

En laderas con voluacutemenes intermedios de escorrentiacutea (Figura 3) la disponibilidad de agua en el suelo estaacute asociada a distintos microambientes geomorfoloacutegicos que funcionan como fuentes y sumideros de escorren-tiacutea y sedimentos La presencia de las especies vegeta-les y su distribucioacuten espacial responden a dicha oferta de agua con gramiacuteneas sembradas (Lolium perenne) o establecidas mediante procesos de colonizacioacuten natu-ral (Brachypodium sp) formando manchas densamen-te vegetadas en derramaderos de escorrentiacutea (run-off splays) Estos microambientes se encuentran asociados a microterrazas asiacute como a conos de sedimentacioacuten presentes en las discontinuidades de las redes de re-gueros En estas aacutereas con mayor disponibilidad de re-curso hiacutedrico se ven favorecidas la riqueza de especies y la cubierta vegetal asiacute como la riqueza y abundancia del banco de semillas del suelo lo que incrementa a su vez las posibilidades de germinacioacuten de las se-millas El aporte de agua desde los claros o zonas desprovistas de vegetacioacuten a las manchas de vege-tacioacuten resulta decisiva para ello (Merino Martiacuten 2010) En efecto se han identificado geoformas exportadores de agua colonizadas por individuos de Santolina sp e importadoras cubiertas por Lolium sp remanente de la siembra inicial del tratamiento de revegetacioacuten

Figura 3 Ladera con un patroacuten de manchas de vegetacioacuten estable-cidas en geoformas exportadoras (Santolina sp de flor amarilla) o importadoras (Lolium sp) de agua La distinta oferta hiacutedrica de las geoformas condiciona el patroacuten espacial de la vegetacioacuten Las flechas indican el flujo de agua desde las zonas exportadoras de Santolina sp hacia las importadoras de Lolium sp (dentro de los ciacuterculos) Noacutetese la ceja superior en la ladera que ejerce como aacuterea exportadora de escorrentiacutea hacia el conjunto de la ladera

En las laderas con voluacutemenes limitados de esco-rrentiacutea (que no reciben flujos externos Figura 4) la distribucioacuten espacial de la vegetacioacuten no estaacute asociada a geoformas derivadas de procesos de erosioacuten-sedimentacioacuten y es la misma vegetacioacuten la que controla el flujo del agua superficial y la distri-bucioacuten de la humedad Se pasa pues de un con-trol geomorfoloacutegico sobre el agua a otro bioloacutegico En las primeras etapas de la sucesioacuten ecoloacutegica se establece una formacioacuten de matorral disconti-nuo constituida principalmente por individuos de Genista scorpius (aliaga) Los individuos de esta especie pueden actuar como isla de actividad bio-loacutegica potenciada hidroloacutegicamente Por un lado mejoran sustancialmente las condiciones ambien-tales de su entorno (aportando sombra y aumen-tando el contenido de nutrientes) y por otro son capaces de interceptar el agua que circula en forma de escorrentiacutea superficial procedente de otras aacutereas desprovistas de vegetacioacuten debido al incremento en la tasa de infiltracioacuten del suelo bajo su dosel Asiacute los individuos de esta especie ejercen un efec-to facilitador sobre las plantas que crecen bajo su dosel que presentan mejor estado hiacutedrico que las situadas fuera de la influencia de la planta en las zonas de los claros desprovistas de vegetacioacuten (Merino Martiacuten 2010) Un nuevo disentildeo de las reve-getaciones alternativo a las plantaciones lineales puede surgir a partir del uso de especies capaces de funcionar como islas de fertilidad en un patroacuten de matas y claros

Figura 4 Ladera colonizada por Genista scorpius especie que ac-tuacutea como isla de actividad bioloacutegica potenciada hidroloacutegicamente Las especies del subvuelo de G scorpius se ven hidroloacutegicamente facilitadas lo que indica que existe un control bioacutetico del ciclo del agua No existen entradas externas de escorrentiacutea desde la cabecera

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Disminucioacuten de la ratio fuentesumidero

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Figura 1 Gradiente de interacciones ecohidroloacutegicas desde el dominio de la reguerizacioacuten (control abioacutetico) hasta el dominio de la vegetacioacuten arbustiva (control bioacutetico mediado por las islas de fertilidad) (Merino Martiacuten et al 2011)

Figura 2 Ladera reguerizada con control abioacutetico del ciclo del agua y reducido establecimiento de la vegetacioacuten El deacuteficit hiacutedrico acen-tuado por los regueros limita el establecimiento y desarrollo de la vegetacioacuten Noacutetese que los ejemplares de Medicago sativa se localizan en el borde de los regueros El elevado volumen de esco-rrentiacutea circulante tiene su origen en una amplia cabecera de ladera exportadora de escorrentiacutea

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Las especies vegetales identificadas en las parcelas ex-perimentales durante los trabajos expuestos en este capiacutetulo se clasificaron en dos grupos introducidas mediante teacutecnicas de revegetacioacuten y especies que colonizan de forma natural (Moreno de las Heras et al 2008) A su vez clasifican las que llegan de forma natural en frecuentes (presentes en maacutes del 5 de los taludes) y escasas (presentes en menos de 5 de los taludes) En la paacutegina de la izquierda se muestran seis especies pertenecientes al grupo de las frecuentes que de izquierda a derecha y de arriba abajo son Llanteacuten blanco (Plantago albicans) aguja de pastor (Erodium ciconium) murajes (Anagallis arvensis) hierba betun-era (Psoralea bituminosa) rabanza (Diplotaxis eruci-odes) y aacuternica (Pallenis spinosa) Sobre estas liacuteneas de izquierda a derecha y de arriba abajo se muestran otras tantas especies pertenecientes al grupo de las es-casas alheliacute triste (Matthiola fruticulosa) untildea de gato (Sedum sediforme) chiribita (Bellis perennis) alcabota (Mantisalca salmantica) aguilentildea (Aquilegia vulgaris) y hierba cana (Senecio vulgaris) Autor Ignacio Mola

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sIV CONCLUSIONES SOBRE LOS EFECTOS DE LA EROSIOacuteN

Los trabajos mencionados permiten precisar los efectos de la erosioacuten (por regueros y laminar) sobre el suelo y la vegetacioacuten en estas laderas artificia-les De este modo las restricciones impuestas por la erosioacuten al desarrollo vegetal dificultan considera-blemente la incorporacioacuten de materia orgaacutenica en el suelo (Moreno de las Heras 2009b) En consecuencia los procesos de desarrollo y organizacioacuten espacial de la estructura fiacutesica y funcionalidad bioloacutegica del suelo se ven draacutesticamente limitados Entre ellos el desarrollo de la estabilidad de los agregados el ta-mantildeo de las poblaciones microbianas y su actividad asiacute como la mineralizacioacuten de la materia orgaacutenica y el reciclado de nutrientes del suelo (nitroacutegeno y foacutes-foro) Incluso en condiciones de erosioacuten moderada los procesos de formacioacuten edaacutefica son considerable-mente lentos probablemente debido a las pequentildeas cantidades de materia orgaacutenica acumuladas en el suelo (en general inferiores al 2)

La relacioacuten entre los procesos erosivos y el desa-rrollo de los ecosistemas de ladera restaurados es

fundamentalmente no lineal (Moreno de las Heras et al 2011) Asiacute la disponibilidad de agua para la pro-duccioacuten vegetal se ve reducida de forma exponencial con las tasas de erosioacuten generando a su vez caiacutedas paralelas en los atributos baacutesicos de las comunida-des vegetales (biomasa y riqueza) y en la actividad de los procesos de formacioacuten del suelo En cuanto al efecto de la vegetacioacuten herbaacutecea sobre el control de la erosioacuten se ha demostrado que sigue tambieacuten una relacioacuten exponencial negativa seguacuten la cual las tasas erosivas y la generacioacuten de escorrentiacutea se reducen apreciablemente con cubiertas vegetales entre el 30-50 lo que desde el punto de vista aplicado lleva a plantear como objetivo praacutectico de las revegeta-ciones que buscan el control de la erosioacuten alcanzar un cubrimiento del 50 de la superficie del suelo (Moreno de las Heras et al 2009) Diversos trabajos desarrollados en taludes de carretera y ambientes mineros confirman la efectividad de este umbral de cubierta vegetal sobre el control de los procesos ero-sivos en entornos de clima mediterraacuteneo (Andreacutes y Jorba 2000 Loch 2000 Bochet et al 2010)

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Importancia del suelo para la restauracioacuten de la cubierta vegetal

Pablo Garciacutea-Palacios

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CAPIacuteTULO 4 Importancia del suelo para la restauracioacuten de la cubierta vegetal

Pablo Garciacutea-Palacios

I INTRODUCCIOacuteN

El hecho de incluir un capiacutetulo especiacutefico sobre el suelo y sus relaciones con la vegetacioacuten tiene como objetivo principal poner de manifiesto la importancia de los suelos como componente bioacutetico y abioacuteti-co fundamental en los proyectos de restauracioacuten al mismo nivel que la vegetacioacuten

La sucesioacuten de los ecosistemas (veacutease el Capiacutetulo 5 para una explicacioacuten maacutes detallada del concepto de sucesioacuten) se ha centrado tradicionalmente en las co-munidades de plantas (Chapin et al 1994) Sin em-bargo los suelos y las comunidades de organismos (Figura 1) que viven en ellos pueden desempentildear un papel fundamental en el desarrollo de las funciones ecosisteacutemicas antes incluso de que se establezcan las plantas (Bardgett et al 2007) Dado que la restaura-cioacuten se basa esencialmente en la manipulacioacuten de la sucesioacuten (Walker et al 2007) es necesario considerar el papel del suelo y sus interacciones con las plantas asiacute como la dinaacutemica temporal de estas relaciones en la restauracioacuten de los ecosistemas Esta separa-cioacuten claacutesica entre la ecologiacutea vegetal y la ecologiacutea de suelos ha tenido repercusiones aplicadas direc-tas Actualmente en la mayoriacutea de los proyectos de restauracioacuten de infraestructuras lineales el suelo es tratado simplemente como el soporte fiacutesico de las plantas Sin embargo esta tendencia estaacute cambiando y ya existen ejemplos concretos de restauraciones de infraestructuras lineales que han tenido eacutexito gracias a que han reconocido la importancia del suelo desde las fases iniciales del proyecto

El suelo ademaacutes del sustrato mineral contiene materia orgaacutenica aire agua y organismos vivos Su formacioacuten es el resultado de la interaccioacuten a lo largo del tiempo de varios elementos sustratos minerales clima orga-nismos presentes topografiacutea y vegetacioacuten A medida que avanza este proceso de formacioacuten aumenta la proporcioacuten de minerales secundarios (como las arci-llas) la cantidad de material con contenido orgaacutenico se desarrollan comunidades de organismos (inverte-brados hongos bacterias etc) y se incrementa la pro-duccioacuten de nutrientes permitiendo el establecimiento de las plantas La construccioacuten de infraestructuras li-neales produce una serie de impactos negativos sobre

el suelo especialmente cuando se emplean meacutetodos de excavacioacuten (pe desmonte) y en menor medida de acumulacioacuten (pe terrapleacuten) Los principales im-pactos son el empobrecimiento del sustrato y la des-truccioacuten de su estructura En este capiacutetulo se comen-tan los factores y procesos maacutes importantes a la hora de condicionar el desarrollo de la cubierta vegetal que se pretende restaurar Sin embargo ademaacutes de las teacutec-nicas ecotecnoloacutegicas habituales (veacutease Capiacutetulo 6) hay una serie de praacutecticas previas a la construccioacuten de la infraestructura que pueden aumentar enormemente la eficacia de la restauracioacuten del suelo y por lo tanto de la cubierta vegetal

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Figura 1 Fotografiacuteas de tres tipos de organismos clave para el funcionamiento del suelo y el establecimiento de las plantas A) Los organismos que forman la costra bioloacutegica (liacutequenes musgos y cianobacterias) colonizan las capas superficiales del suelo y son muy importantes para la estabilizacioacuten del suelo y el control de la erosioacuten en las fases iniciales de la sucesioacuten B) Noacutedulos radicales formados por la asociacioacuten simbioacutetica entre bacterias (pe Rhizobium) y raiacuteces de plantas leguminosas Esta asociacioacuten permite a las plantas obtener nitroacutegeno de la atmoacutesfera y por lo tanto reducir el uso de fertilizantes quiacutemicos C) Las lombrices de tierra promueven la descomposicioacuten de la materia orgaacutenica y la mezcla de los horizontes edaacuteficos

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II FACTORES Y PROCESOS QUE CONDICIONAN EL EacuteXITO DE LA RESTAURACIOacuteN DE LA CUBIERTA VEGETAL

La identificacioacuten de los factores que condicionan el crecimiento de la cubierta vegetal de los taludes de carretera y otras obras similares es fundamen-tal para la restauracioacuten a largo plazo de estos eco-sistemas degradados (Steinfeld et al 2007) Salvo que se mencione expresamente en este apartado se describen de forma general los principales factores y procesos que condicionan la restauracioacuten de la vegetacioacuten independientemente del tipo de talud Sin embargo las diferencias entre desmontes y te-rraplenes son fundamentales a la hora de determinar la importancia de cada factor

1 Aportes y peacuterdidas de agua

a Precipitacioacuten

En ausencia de riego praacutectica poco habitual en los maacutergenes de infraestructuras lineales la precipita-cioacuten es el principal aporte de agua La escasez de precipitaciones es un problema en algunas zonas del sur y sureste peninsular En general cuando la precipitacioacuten total no supera los 400 mm anuales podemos hablar de clima semiaacuterido En estas zonas las lluvias son el principal factor limitante para el desarrollo de la vegetacioacuten

b Balance infiltracioacuten-escorrentiacutea

El proceso principal que regula el equilibrio entre la cantidad de agua aportada por las precipitaciones y la que realmente es absorbida por el suelo es el balance entre infiltracioacuten y escorrentiacutea Cuando las tasas de infiltracioacuten son inferiores a las precipita-ciones se produce escorrentiacutea superficial y la con-siguiente peacuterdida de agua de lluvia Ademaacutes la es-correntiacutea arrastra materiales aumentando la erosioacuten del suelo y la peacuterdida de semillas a lo largo de la pendiente El tamantildeo y la abundancia de los agrega-dos superficiales del suelo determinan las tasas de infiltracioacuten La compactacioacuten del suelo por maquina-ria pesada durante la estabilizacioacuten de la pendiente disminuye enormemente la infiltracioacuten

c Capacidad de almacenamiento de agua uacutetil del suelo

Las propiedades hidroloacutegicas del suelo determi-nan el nuacutemero de diacuteas que el agua estaacute disponible para las plantas La cantidad de agua almacenada en el suelo se denomina capacidad de campo y depende principalmente de la textura del suelo de su estructura y de su contenido en materia or-gaacutenica Los terraplenes y los desmontes se suelen comportar de forma completamente diferente en este sentido Bochet y Garciacutea-Fayos (2004) obser-varon coacutemo en desmontes de Valencia el agua soacutelo estaba disponible para las plantas durante 15 diacuteas desde la uacuteltima precipitacioacuten Este tiempo au-mentaba hasta 7 meses en terraplenes cercanos Las distintas propiedades hidroloacutegicas del suelo de ambos taludes explican estas diferencias tan acusadas Por lo tanto en zonas semiaacuteridas el factor limitante para la vegetacioacuten no es tanto la lluvia sino el tiempo que el agua estaacute disponible para las plantas en el suelo

2 Reciclado de nutrientes y fertilidad

En general se asume que una limitacioacuten importan-te de los nuevos sustratos generados en la cons-truccioacuten de infraestructuras lineales es su baja fer-tilidad La fertilizacioacuten a gran escala es una teacutecnica de revegetacioacuten muy extendida que se suele llevar a cabo sin una evaluacioacuten previa de la fertilidad del suelo a restaurar Sin una evaluacioacuten previa la aplicacioacuten de la fertilizacioacuten por defecto por poner un ejemplo es lo mismo que si un doctor le receta medicinas a un paciente sin haberle diagnosticado previamente Por lo tanto un elemento clave para la restauracioacuten de la vegetacioacuten es la evaluacioacuten previa de los factores edaacuteficos que pueden condi-cionar su desarrollo En Espantildea hay muchos labo-ratorios tanto privados como vinculados a organis-mos puacuteblicos de investigacioacuten que se dedican a analizar muestras de suelo En la Tabla 1 se recogen algunos de los laboratorios de anaacutelisis de suelo que hay en Espantildea

Tabla 1 Ejemplos de laboratorios de anaacutelisis de suelos en Espantildea

NOMBRE CARAacuteCTER DIRECCIOacuteN PAacuteGINA WEB EMAIL

Agrolab analitica Privado Poliacutegono Industrial Mutilva Baja Calle S nordm 8 31192-Mutilva Baja Navarra

wwwagrolabes

Centro de Apoio Cientiacutefico Tecnoloacutexico aacute Investigacioacuten

Puacuteblico Universidade de Vigo Campus Lagoas-Marcosende 15 36310-Vigo

httpwebsuvigoescactiweb

Laboratorios Escuredo

Privado C Dr Domegravenech 1 planta 43203-Reus Tarragona

labescuredonet

Laboratorio Agroalimentario de Atarfe

Puacuteblico Avda de la Diputacioacuten sn 18230-Atarfe Granada

Servizos de Apoio a Investigaccedilatildeo

Puacuteblico Universidad de A Coruntildea Servizos de Apoio aacute Investigacioacuten Edificio Servicios Centrales de Investigacioacuten Campus de Elvintildea sn 15071 A Coruntildea

httpwwwsaiudcescastellanophpintrophp

NutriLab-URJC Puacuteblico Edificio Departamental I laboratorio 225 C Tulipaacuten sn 28933-Moacutestoles

httpwwwnutrilab-urjcesplt_Homeaspx

El reciclado de nutrientes es el proceso por el cual el suelo almacena y libera nutrientes esenciales para el crecimiento y la supervivencia de las plan-tas El objetivo de este apartado no es explicar cuaacuteles son los nutrientes limitantes para el cre-cimiento de las plantas (informacioacuten disponible en cualquier libro especializado) sino poner de manifiesto la importancia de este proceso natural para el desarrollo de la vegetacioacuten Cuando se trata de restaurar taludes de infraestructuras li-neales el objetivo principal es crear sistemas que sean autosuficientes a largo plazo Por lo tanto favorecer el reciclado de nutrientes maacutes allaacute de las aportaciones puntuales que pueda ocasionar la fertilizacioacuten es una herramienta muy eficaz para favorecer procesos sucesionales durante el pro-yecto de restauracioacuten

a Carbono y nitroacutegeno

El nitroacutegeno suele ser el nutriente maacutes limitante para el crecimiento de las plantas y por lo tanto para la recuperacioacuten de la cubierta vegetal en los

taludes de infraestructuras lineales (Petersen et al 2004) En general se habla de un miacutenimo de 700 kg N totalha para el automantenimiento de un ecosistema fuertemente degradado (Bradshaw et al 1982) El carbono regula la cantidad de nitroacute-geno disponible en los suelos porque es la fuen-te de energiacutea principal para los microorganismos del suelo encargados de descomponer la materia orgaacutenica La proporcioacuten de carbono y nitroacutegeno presente en el suelo (CN) es un buen indicador de deacuteficit o superaacutevit de nitroacutegeno para las plantas Si los organismos descomponedores no encuen-tran suficiente nitroacutegeno en la materia orgaacutenica lo tomaraacuten directamente del suelo compitiendo seriamente por este nutriente con las plantas Por ejemplo un CN de 301 o mayor indica que los descomponedores han consumido el nitroacutegeno disponible en el suelo dejando muy poco para las plantas Por lo tanto no existe una solucioacuten uacutenica y general en relacioacuten con la fertilidad del suelo y las consecuencias para la vegetacioacuten ya que el balance puede ser positivo o negativo seguacuten el objetivo que se quiera conseguir

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bull Si el objetivo es aumentar raacutepidamente la cobertu-ra vegetal con la intencioacuten de evitar la erosioacuten de los primeros meses posteriores a la construccioacuten del talud un alto contenido en nitroacutegeno favore-ceraacute la presencia de especies vegetales nitroacutefilas de raacutepido crecimiento Por lo tanto la fertilizacioacuten puede ser una buena solucioacuten a corto plazo para aumentar la cobertura vegetal de taludes extrema-damente pobres como los taludes semiaacuteridos de la provincia de Valencia (0074 mg N totalg sue-lo) donde los tratamientos de restauracioacuten han de mejorar draacutesticamente las propiedades del suelo como paso previo a la colonizacioacuten de semillas desde zonas naturales (Bochet et al 2007)

bull Si el objetivo es promover la diversidad de la comunidad de plantas y favorecer la entrada de especies de lento crecimiento caracteriacutesticas de etapas sucesionales maacutes avanzadas un alto con-tenido en nitroacutegeno puede ser contraproducen-te Las especies de raacutepido crecimiento anteriores dominaraacuten la comunidad e impediraacuten el estable-cimiento de especies nativas perennes En este caso la aplicacioacuten de productos vegetales de alto contenido en CN (mulch paja etc) a la superfi-cie del suelo o mezclado en eacutel es una buena es-trategia para disminuir la cantidad de nitroacutegeno disponible para las especies anuales dominantes (veacutease Capiacutetulo 7) y favorecer la presencia de especies de intereacutes para la restauracioacuten a largo plazo (lentildeosas perennes etc)

b Actividad bioloacutegica e interacciones planta-organismos del suelo

La tasa de cambio hacia la vegetacioacuten natural a lo largo de la sucesioacuten secundaria en ecosistemas antropizados depende en gran medida de las in-teracciones entre las plantas y la biota del suelo (Wardle et al 2004 Holtkamp et al 2008) Las comunidades de plantas estaacuten iacutentimamente aso-ciadas a los organismos del suelo y a los procesos ecoloacutegicos que se desarrollan en eacutel Las plantas proporcionan carbono y otros nutrientes a las co-munidades de descomponedores del suelo y sus raiacuteces tambieacuten constituyen el haacutebitat adecuado para multitud de organismos como herbiacutevoros patoacutegenos y simbiontes (Wardle 2002 Bardgett 2005) Por otro lado la biota del suelo determina la estructura y la productividad de las comunida-des vegetales a traveacutes de la descomposicioacuten de la materia orgaacutenica que condiciona la disponibilidad

de nutrientes para las plantas Sin embargo la biota del suelo tambieacuten controla la estructura y la composicioacuten de las comunidades vegetales a traveacutes de las relaciones entre las plantas y los organismos que estaacuten iacutentimamente asociados a sus raiacuteces (Wardle 2002) La contribucioacuten de los microorganismos del suelo a distintos procesos ecosisteacutemicos de intereacutes para las plantas es altiacute-sima pudiendo llegar a controlar hasta el 50 de la productividad vegetal el 80 de la absorcioacuten de nitroacutegeno y foacutesforo y el 50 de la diversidad vegetal en ecosistemas terrestres (Van der Heijden et al 2008) Estas relaciones pueden ser mutualis-tas como las formadas con las bacterias fijadoras de nitroacutegeno o con los hongos micorriacutecicos (Figura 2A y 2B) o antagonistas como las establecidas con los herbiacutevoros y los patoacutegenos de las raiacuteces (Figura 2C y 2D) Las plantas vasculares con sim-biontes fijadores de nitroacutegeno (pe leguminosas) tienen una importancia capital durante las etapas iniciales de las sucesioacuten porque aumentan los ni-veles de este nutriente en el suelo hasta alcan-zar los requeridos por especies caracteriacutesticas de etapas tardiacuteas de la sucesioacuten (Walker y del Moral 2003) Las asociaciones con hongos micorriacutecicos estaacuten ampliamente extendidas en el reino vegetal Se estima que aproximadamente el 80 de todas las plantas terrestres forman asociaciones simbioacute-ticas con este tipo de hongos (Smith y Read 1997) Los hongos micorriacutecicos aportan resistencia a las enfermedades y a la sequiacutea y proporcionan una variedad de nutrientes a las plantas incluyendo nitroacutegeno foacutesforo cobre hierro y zinc (Van der Heijden et al 2008) Las relaciones antagonistas o perjudiciales para las plantas las suelen pro-vocar los patoacutegenos y los herbiacutevoros de las raiacute-ces Este tipo de relaciones han sido ampliamente estudiadas en un contexto agronoacutemico aunque su papel como modulador de la dinaacutemica de las comunidades vegetales y la sucesioacuten es mucho maacutes desconocido (Wardle 2002) No obstante hay evidencias que sugieren un papel clave de estos organismos en la sustitucioacuten de las especies vege-tales pioneras por especies tardiacuteas de la sucesioacuten (Van der Putten et al 1993) Por lo tanto este tipo de interacciones entre las plantas y la bio-ta del suelo tiene implicaciones muy importantes para la restauracioacuten de los ecosistemas afectados por infraestructuras lineales en donde uno de los objetivos principales a largo plazo es el estable-cimiento de comunidades vegetales caracteriacutesticas de etapas sucesionales avanzadas

Figura 2 A) Noacutedulos bacterianos de fijacioacuten de nitroacutegeno asociados a la raiacutez de una leguminosa B) Red micorriacutecica formada por las hifas de un hongo C) Nematodo del geacutenero Heterodera herbiacutevoro de las raiacuteces de muchas especies de intereacutes agronoacutemico D) Hongo del geacutenero Pythium patoacutegeno de las raiacuteces muy comuacuten en muchas especies de plantas vasculares (Fuente httpwwwusdagov)

Existen pocos trabajos sobre las implicaciones para la restauracioacuten de las interacciones planta-biota del suelo y la mayoriacutea de ellos se han desarrolla-do en campos agriacutecolas abandonados de Europa central Kardol et al (2006) establecieron que el signo de estas interacciones cambiaba de negativo a positivo a lo largo de la sucesioacuten y atribuiacutean la temporalidad de las especies vegetales pioneras y la persistencia de las especies caracteriacutesticas de etapas sucesionales avanzadas a este tipo de me-canismos En herbazales de taludes de carretera del sureste semiaacuterido de Madrid Garciacutea Palacios et al (2011) observaron coacutemo cinco antildeos despueacutes de la construccioacuten de un terrapleacuten las interacciones planta-microorganismos del suelo eran capaces de promover un eficiente reciclado de los nutrientes

(Figura 3) En este caso (terraplenes de clima se-miaacuterido con pendientes inferiores a 30deg) no era necesario haberse gastado mucho presupuesto en tratamientos de restauracioacuten como la fertilizacioacuten o la hidrosiembra Los cambios sucesionales a corto plazo (cinco antildeos) en la composicioacuten de las comu-nidades vegetales y microbianas del suelo fueron capaces de mejorar el reciclado de nutrientes un proceso clave para la restauracioacuten a largo plazo de estos herbazales Por ello una de las teacutecnicas maacutes prometedoras para la restauracioacuten de taludes de infraestructuras lineales y que tiene en cuenta la importancia de las interacciones planta-organismos del suelo es el uso de inoacuteculos de suelo como ca-talizador de la sucesioacuten vegetal (Estauacuten et al 2007 Steinfeld et al 2007)

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Talud de dos antildeos

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COMUNIDADMICROBIANA

R2 = 040 RECICLADODE NUTRIENTES

COMUNIDADVEGETAL

COMUNIDADMICROBIANA

R2 = 075 RECICLADODE NUTRIENTES

Talud de cinco antildeos

Figura 3 Interacciones comunidad vegetal-comunidad microbiana del suelo en dos terraplenes de distinta edad de la provincia de Madrid (Autopistas R4 y AP-36) En el esquema se observa coacutemo las interacciones planta-microorganismos del suelo eran responsables del 40 del reciclado de nutrientes en los terraplenes maacutes joacutevenes Este valor aumentoacute hasta el 75 en los taludes de cinco antildeos (Fuente Garciacutea-Palacios et al 2011)

c pH y salinidad

El pH del suelo modula la disponibilidad de los nutrientes minerales la toxicidad mineral y la fija-cioacuten de nitroacutegeno Si los suelos son aacutecidos (pH lt 6) la habilidad de las plantas para utilizar algunos nutrientes como el calcio o el magnesio disminuye Si la acidez es auacuten mayor (pH lt 45) el aluminio se vuelve soluble y toacutexico para las plantas Si los suelos son baacutesicos o alcalinos (pH lt 8) la elevada presencia de carbonatos puede interferir en la ob-tencioacuten de nutrientes como el foacutesforo hierro o zinc En suelos muy salinos (pH lt 85) tiacutepicos de zonas aacuteridas y semiaacuteridas la concentracioacuten de sodio pue-de impedir la absorcioacuten de agua por las plantas La tierra vegetal tiene contenidos en sales menores que las capas inferiores por lo tanto si durante la construccioacuten del talud es retirada la salinidad del suelo puede aumentar draacutesticamente Como en ca-sos anteriores una correcta evaluacioacuten previa debe ser realizada antes de decidir queacute teacutecnica de res-tauracioacuten se debe emplear

d Tierra vegetal

La capa superficial del suelo (sus primeros centiacutemetros) o tierra vegetal (en ingleacutes topsoil) es el horizonte edaacute-fico que se encuentra justo debajo de la hojarasca y que se caracteriza por contener grandes cantidades de materia orgaacutenica raiacuteces y semillas (Balaguer 2002 Tor-mo et al 2007) La tierra vegetal tiene una alta concen-tracioacuten de nutrientes disponibles para las plantas Asiacute mismo alberga la mayor parte de la actividad bioloacutegica del suelo amortigua las condiciones microclimaacuteticas y disminuye la peacuterdida de agua por evaporacioacuten (Tormo et al 2009) Los sitios que carecen de tierra vegetal no pueden albergar comunidades productivas de plantas ni coberturas vegetales altas lo cual se traduce en ero-sioacuten Una praacutectica habitual en la construccioacuten de infra-estructuras lineales es la retirada y almacenamiento de los horizontes superficiales del suelo (30-50 cm) para reincorporarlos posteriormente a la superficie de los ta-ludes recieacuten generados La aplicacioacuten de tierra vegetal si esta se ha conservado debidamente (veacutease aparta-do III2 Almacenamiento del suelo) puede suavizar la

mayor parte de las condiciones edaacuteficas para el desa-rrollo de la vegetacioacuten Un buen ejemplo de los efectos de la tierra vegetal para la restauracioacuten de la vegeta-cioacuten de taludes de carretera es el estudio de Tormo et al (2007) realizado en taludes de Valencia bajo clima semiaacuterido En este estudio las parcelas con tierra ve-getal alcanzaron en un antildeo los mismos valores de co-bertura vegetal que las parcelas sin dicho tratamiento alcanzaron en cuatro Sin embargo existen diferencias en cuanto al eacutexito de la tierra vegetal entre desmontes y terraplenes Mientras que en terraplenes suele ser un tratamiento muy eficaz para aumentar la cobertura ve-getal durante los primeros antildeos de la restauracioacuten en desmontes con elevada pendiente (gt30ordm) la aplicacioacuten de tierra vegetal suele fracasar (Valladares et al 2004) al menos en la mayor parte del talud (Figura 4)

3 Condiciones fiacutesicas

Un aspecto clave para el eacutexito de la colonizacioacuten vegetal en suelos degradados como los que forman

los taludes de infraestructuras lineales es la textura del material (Tormo et al 2009) Si la textura de los materiales es demasiado gruesa los nutrientes y el agua no podraacuten quedar retenidos en los poros del suelo

Si a esto le unimos una elevada pedregosidad del terreno la disponibilidad de nutrientes y agua para las plantas seraacute muy reducida incluso con al-tas precipitaciones y una eficiente mineralizacioacuten de la materia orgaacutenica Si la textura de los ma-teriales es demasiado fina (dominio de arcillas) se pueden producir condiciones de encharcamien-to y falta de oxiacutegeno (anaerobiosis) que pueden afectar al establecimiento de las plantas Por lo tanto las condiciones idoacuteneas se consiguen con una textura equilibrada La falta de materia orgaacute-nica es otro factor que condiciona enormemente la estructuracioacuten de los suelos de los taludes y que tambieacuten contribuye a disminuir la retencioacuten de agua y nutrientes y se da maacutes frecuentemente en texturas gruesas que finas

Figura 4 Banda de vegetacioacuten favorecida por la presencia de tierra vegetal en la cabecera de un desmonte de la autopista de la Costa del Sol (Maacutelaga) (Foto Archivo documental del Grupo de Ecologiacutea y Fisiologiacutea vegetal de Plantas Mediterraacuteneas del IRN-CCMA CSIC)

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III MEDIDAS PREVENTIVAS

En el apartado anterior se han descrito los principales factores del suelo que condicionan el desarrollo de la cubierta vegetal a restaurar y coacutemo la tierra vegetal puede paliar algunos de los deacuteficits de los sustratos generados por infraestructuras lineales A continuacioacuten se detallan algunas medidas preventivas que pueden tomarse en la fase de construccioacuten del talud para re-ducir los efectos negativos de los anteriores factores edaacuteficos en la restauracioacuten de la cubierta vegetal

1 Movimiento del suelo

El principal cambio que sufre el suelo durante su extraccioacuten y transporte en las obras de construc-cioacuten de la infraestructura lineal es el aumento de la compactacioacuten con la consiguiente disminucioacuten de la porosidad La baja porosidad del suelo afecta negativamente a la capacidad de las raiacuteces de las plantas para penetrar en profundidad disminuye el movimiento de agua y nutrientes y aumenta la pro-babilidad de que se den condiciones anaeroacutebicas (Harris et al 1996) La compactacioacuten del suelo es un fenoacutemeno difiacutecil de corregir y de un elevado costo Por lo tanto los movimientos de tierra realizados durante la fase de construccioacuten de la infraestructura lineal deben disentildearse con la intencioacuten de mitigar la gravedad de este impacto Las actuaciones que pueden llevarse a cabo para prevenir la compacta-cioacuten del suelo tienen que ver con la maquinaria que se utilice en la construccioacuten del talud (peso tipo de neumaacuteticos velocidad de trabajo nuacutemero de pasa-das etc) y con la naturaleza del sustrato (contenido en humedad materia orgaacutenica etc)

2 Almacenamiento del suelo

Los impactos maacutes negativos para el suelo como sus-trato para el crecimiento de la vegetacioacuten a nivel bioloacutegico quiacutemico y fiacutesico ocurren durante su al-macenamiento como paso previo a su colocacioacuten en el emplazamiento definitivo (Harris et al 1996) La duracioacuten del almacenamiento es fundamental para el eacutexito posterior del extendido de la tierra vegetal Asiacute Rokich et al (2000) registraron una disminucioacuten del 50 en la germinacioacuten de semillas en las parcelas tratadas con tierra vegetal almacenada durante un antildeo respecto a las que fueron tratadas con tierra ve-getal fresca La altura de los acuacutemulos de tierra tam-bieacuten es importante Las capas superiores mantienen condiciones aeroacutebicas durante el almacenamiento

Las capas maacutes profundas desarrollan condiciones anaeroacutebicas (Harris et al 1996) La capa intermedia oscila entre ambas dependiendo de las condiciones de humedad El tamantildeo y la velocidad de los efectos negativos dependen de las caracteriacutesticas texturales del suelo Los suelos arcillosos se vuelven anaero-bios en un 90 cuando la altura del acuacutemulo de tierra supera los 2 metros Sin embargo los suelos arenosos aguantan alturas similares con un porcen-taje de condiciones anaeroacutebicas mucho maacutes bajo Por lo tanto la altura de los acuacutemulos de tierra debe ser lo maacutes baja posible siempre teniendo en cuenta el espacio del que se disponga El porcentaje de anaerobiosis presente en la tierra vegetal almacena-da debe ser tenido en cuenta a la hora de planificar los futuros tratamientos de restauracioacuten Los efectos que se producen durante la fase de acumulacion del suelo fundamentalmente en las capas maacutes profun-das son los siguientes

a Efectos fiacutesicos

Fundamentalmente acentuacutean los efectos producidos durante la fase de transporte Se rompen las es-tructuras bioloacutegicas que mantienen las partiacuteculas del suelo unidas La disminucioacuten en la estabilidad de los agregados dificulta la capacidad del suelo para pro-porcionar una aireacioacuten y drenaje adecuados para el crecimiento vegetal Cualquier perforacioacuten producida por invertebrados del suelo o por tratamientos de restauracioacuten seraacute raacutepidamente bloqueada por pe-quentildeas partiacuteculas que ya no estaacuten unidas formando agregados estables

b Efectos quiacutemicos

Dado que la compactacioacuten imposibilita el aporte de oxiacutegeno al suelo es normal que se desarrollen con-diciones anaeroacutebicas durante los primeros meses del almacenamiento En esta situacioacuten se producen gran cantidad de sulfitos que dan el caracteriacutestico color gris al suelo poco aireado La falta de oxiacutege-no tambieacuten impide la transformacioacuten de nitroacutegeno orgaacutenico a nitrato producida durante la mineraliza-cioacuten de la materia orgaacutenica El ciclo del nitroacutegeno se detiene en el amonio que se acumula a costa de una disminucioacuten en el nitrato Ademaacutes el nitrato acumulado anteriormente se transforma en nitroacutege-no gaseoso que termina en la atmoacutesfera Cuando el suelo se extiende para construir el talud el nitroacute-geno acumulado se puede perder raacutepidamente con las primeras lluvias

c Efectos bioloacutegicos

La abundancia de microorganismos en el suelo almacenado disminuye en profundidad impidien-do la realizacioacuten de las funciones claves para el

reciclado de nutrientes anteriormente detalladas Los invertebrados como las lombrices de tierra son extremadamente susceptibles ya que son fiacutesi-camente destruidos durante el transporte y alma-cenamiento del suelo

VI EJEMPLOS DE EacuteXITO Y DE FRACASO

Ejemplo de eacutexito Uso de inoacuteculos de micorrizas para la restauracioacuten de especies lentildeosas en taludes de carretera y canteras (Caravaca et al 2003)

Doacutende y cuaacutendo Murcia (38deg 23rsquo N 1deg 10rsquo O) 2000-2001

Ecosistema a restaurar espartal semiaacuterido degrada-do por pastoreo y talas Precipitacioacuten total 315 mm temperatura media 20 degC Sustrato calizo Cobertura inicial del 20 dominada por Rosmarinus officina-lis y Stipa tenacissima Cuatro especies de arbusto como objetivo de la restauracioacuten

Tratamiento inoacuteculo de micorrizas en tres niveles inoacuteculo nativo de suelo de un aacuterea natural cercana [(compuesto por esporas de Glomus geosporum (Ni-col amp Gerd) Walker (EEZ 31) Glomus albidum Walker amp Rhodes (EEZ 39) Glomus microaggregatum Koske Gemma amp Olexia (EEZ 40) Glomus constrictum Tra-ppe (EEZ 42) Glomus mosseae (Nicol amp Gerd) Gerd amp Trappe (EEZ 43) Glomus coronatum Giovannetti (EEZ 44) Glomus intraradices Schenck amp Smith (EEZ 45) y Glomus sp (EEZ 46)] inoacuteculo exoacutetico [(com-puesto por esporas de Glomus claroideum Schenck amp Smith (EEZ 24)] y control

IV PREGUNTAS CLAVE

iquestCuaacuteles son las condiciones iniciales del suelo

Para contestar a esta pregunta se deben analizar distintas variables edaacuteficas (pH carbono nitroacute-geno foacutesforo textura salinidad estabilidad de agregados banco de semillas) en laboratorios externos o mediante convenios con centros de investigacioacuten

iquestQueacute hago con la tierra vegetal

Evitar retirarla siempre que se pueda En caso contrario el almacenamiento hasta su posterior extendido debe durar el menor tiempo posible

iquestCoacutemo almaceno la tierra vegetal

En acuacutemulos de tierra de poca altura y compactacioacuten

iquestQueacute tratamientos son necesarios para recuperar la cubierta vegetal

En primer lugar se ha de evaluar la necesidad de llevar a cabo una restauracioacuten activa Este tipo de restauracioacuten se justificaraacute uacutenicamente en los ca-sos en los que la colonizacioacuten natural de semillas desde aacutereas cercanas y la posterior sucesioacuten del ecosistema se vean fuertemente limitadas por las condiciones edaacuteficas del sitio a restaurar

V ERRORES HABITUALES

bull Destruccioacuten o descarte de la tierra vegetal o topsoil durante la fase de construccioacuten

bull Mezcla de la tierra vegetal o topsoil con el resto del suelo del talud o con materiales de construccioacuten externos

bull Acuacutemulos de suelo de gran altura independiente-mente de sus caracteriacutesticas texturales y almace-nados durante periodos prolongados de tiempo

bull Fertilizacioacuten a gran escala desde el primer antildeo de la restauracioacuten sin realizar anaacutelisis previos del suelo

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Resultados Como se puede observar en la Figura 5 un antildeo despueacutes de la plantacioacuten la biomasa (peso seco) de Olea europaea y de Pistacia lentiscus fue un 630 y 300 respectivamente mayor en los tratamientos inoculados que en los no inoculados La biomasa de Retama sphaerocarpa fue significa-tivamente mayor en los plantones inoculados con micorrizas exoacuteticas La biomasa de Rhamnus lycioi-des fue significativamente mayor en los plantones inoculados con micorrizas nativas

Conclusiones El uso de inoacuteculos de suelo con mi-corrizas es una buena estrategia para aumentar la biomasa de especies lentildeosas de intereacutes para la restauracioacuten

En algunas ocasiones las esporas de micorrizas recogidas en zonas cercanas al aacuterea a restaurar son maacutes efectivas que los inoacuteculos comerciales para garantizar el establecimiento de arbustos nativos

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Figura 5 Peso seco de O europaea P lentiscus R sphaerocarpa y R lycioides bajo los tres tratamientos de inoacuteculos de micorrizas evaluados Los datos son medias plusmn error estaacutendar Modificado a partir de Caravaca et al (2003)

Ejemplo de fracaso Restauracioacuten de un herbazal de carre-tera mediante inoculacioacuten de micorrizas (White et al 2008)

Doacutende y cuaacutendo Minnesota EE UU (44deg 46acuteN 93deg 24acuteO) 1997-1999

Ecosistema a restaurar Herbazal en un talud de carretera Precipitacioacuten total 700 mm temperatura

media 59 degC Sustrato arenoso Cobertura inicial del 30 dominada por especies anuales pioneras

Tratamiento inoacuteculo de micorrizas en tres ni-veles inoacuteculo local (uso de suelo de un aacuterea natural cercana dosis de 23000 esporasm2) inoacuteculo comercial (dosis de 4800 esporam2) y control

Resultados Como se puede observar en la Figura 6 ni la biomasa total (A) ni el porcentaje de biomasa total compuesto por especies objetivo para la res-tauracioacuten (B) fueron positivamente afectados por los dos tipos de inoacuteculos tanto en 1998 (Biomasa total F

312 = 0442 P = 0636 Especies objetivo

F312

= 0585 P = 0728) como en 1999 (Biomasa total F

312 = 0442 P = 0728 Especies objetivo

F312

= 0493 P = 0694)

Conclusiones la elevada fertilidad fundamental-mente de foacutesforo disponible y la presencia de mi-corrizas en el suelo inicial diluyeron los efectos del inoacuteculo en las comunidades vegetales Este estudio pone de manifiesto la importancia de realizar anaacuteli-sis del suelo como paso previo a la restauracioacuten Los inoacuteculos de suelo solo son necesarios cuando las condiciones del mismo son especialmente limitantes para la vegetacioacuten

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Figura 6 Biomasa total (A) y proporcioacuten de la biomasa total compuesta por especies objetivo para la restauracioacuten (B) Las especies objetivo de la restauracioacuten son tanto las introducidas en la siembra como aquellas que colonizaron el talud desde aacutereas naturales cercanas Los datos son medias plusmn error estaacutendar Modificado a partir de White et al (2008)

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Valladares F D Tena S Matesanz E Bochet D Bote M Costa P Garciacutea-Fayos J Tormo y V Alfaya 2004 Los herbazales de taludes de carreteras iquestqueacute sabemos de este ecosistema emergente y queacute debe-riacuteamos saber para su gestioacuten VII Congreso Nacional del Medio Ambiente Madrid

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INSECTOS HERBIacuteVOROS

Numerosos insectos se alimentan de plantas sobre todo de sus partes vegetativas (hojas y tallos) En la laacutemina se muestra en la imagen de la izquierda una oruga de mariposa (Fam Pieridae) Las tres imaacute-genes de la derecha corresponden a distintas espe-cies de saltamontes (Ortoptera) Autor Ignacio Mola

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CAPIacuteTULO 5 Procesos ecoloacutegicos y restauracioacuten de la cubierta vegetal

Esther Bochet Pablo Garciacutea-Palacios Begontildea Peco Jaume Tormo y Patricio Garciacutea-Fayos

I INTRODUCCIOacuteN Y OBJETIVOS

Los taludes de infraestructuras lineales (autopistas carreteras caminos viacuteas del trenhellip) se caracterizan por tener amplias pendientes de suelo desnudo y afloramientos rocosos originadas por grandes movi-mientos de tierra Las laderas de los taludes despro-vistas de vegetacioacuten al teacutermino de la obra quedan expuestas al efecto de las lluvias con consecuencias que pueden ser graves para la seguridad vial (Na-varro 2002) Los riesgos de erosioacuten en los primeros meses que pueden llevar al derrumbe del talud en su caso maacutes extremo exigen una intervencioacuten urgente que pretende seguacuten los casos restaurar una cubier-ta vegetal densa en las laderas recieacuten construidas La forma maacutes sencilla y menos costosa de revegetar estas laderas consiste en no intervenir (restauracioacuten pasiva) pero la colonizacioacuten espontaacutenea por parte de las plantas no siempre es suficiente o suficientemente raacutepida Por ello se recurre frecuentemente a teacutecni-cas de restauracioacuten activa que favorecen y aceleran el establecimiento de la vegetacioacuten con el objetivo de controlar la erosioacuten y darle estabilidad al talud La teacutecnica de restauracioacuten maacutes comuacuten para cumplir este objetivo geomorfoloacutegico a corto plazo es la hi-drosiembra El eacutexito de las hidrosiembras es muy va-riable dependiendo en gran medida de factores como el clima la litologiacutea el tipo de talud su orientacioacuten y su pendiente la eacutepoca de la siembra las especies sembradas y las interacciones de estas uacuteltimas entre ellas y con las condiciones de la zona a restaurar (Andreacutes et al 1996 Cano et al 2002 Bochet y Garciacutea-Fayos 2004 veacutease Capiacutetulo 74) Como prueba de

ello se han descrito resultados muy dispares durante los primeros meses posteriores a la actuacioacuten Estos resultados van desde la formacioacuten de una cubierta vegetal densa y eficaz para el control de los procesos erosivos (Matesanz et al 2006) hasta una casi com-pleta desaparicioacuten del conjunto de especies sembra-das con un recubrimiento del suelo insuficiente para frenar la erosioacuten (Andreacutes y Jorba 2000)

Recientemente cientiacuteficos y teacutecnicos coinciden en que el eacutexito de las medidas de restauracioacuten pasa por un avance en el conocimiento ecoloacutegico de estos eco-sistemas emergentes cuyo funcionamiento es poco conocido en la actualidad (Valladares y Gianoli 2007) Asiacute el conocimiento de las reglas que controlan la colonizacioacuten el ensamblaje de las especies y la suce-sioacuten en las comunidades de taludes permitiraacute extraer conclusiones uacutetiles y elaborar pautas generales para la restauracioacuten de estos ecosistemas maacutes allaacute de las especificaciones locales de las zonas a restaurar (Temperton et al 2004 Valladares y Gianoli 2007)

Estudios recientes sobre la flora y la vegetacioacuten de taludes asiacute como sobre los procesos y funciones

asociados a estos ecosistemas nos permiten crear una soacutelida base de conocimiento cientiacutefico necesaria para el desarrollo de protocolos y teacutecnicas eficaces para la restauracioacuten de estas laderas

El objetivo de este capiacutetulo es dar a conocer desde la perspectiva de la ecologiacutea de la restauracioacuten las bases ecoloacutegicas a tener en cuenta a la hora de plantear una restauracioacuten del Capital Natural en for-ma de bienes y servicios (ecosistemas funcionales diversidad etc) en proyectos de infraestructuras lineales Estas bases fundadas en el conocimien-to cientiacutefico constituyen un complemento necesario a las aproximaciones tecnoloacutegicas maacutes habituales (veacutease Capiacutetulo 7) En primer lugar se describe bre-vemente el marco teoacuterico es decir los procesos eco-loacutegicos relevantes que condicionan el eacutexito de una restauracioacuten (colonizacioacuten filtros ecoloacutegicos ensam-blaje de especies en comunidades sucesioacuten) En se-gundo lugar se identifican los factores que limitan la colonizacioacuten espontaacutenea de los ecosistemas de taludes de infraestructuras lineales Finalmente se proponen distintas aplicaciones praacutecticas para una gestioacuten maacutes adecuada de dichos ecosistemas

II PROCESOS ECOLOacuteGICOS RELEVANTES MARCO TEOacuteRICO

1 La colonizacioacuten y la sucesioacuten

Cuando una zona queda desprovista de vegetacioacuten como es el caso de los taludes de infraestructuras lineales se pone en marcha el proceso de sucesioacuten vegetal que comienza por la fase de colonizacioacuten Esta uacuteltima a su vez podriacutea definirse como una funcioacuten de distintos procesos que se suceden en el tiempo la dispersioacuten la fijacioacuten y la germinacioacuten de semillas y el establecimiento de las plantas y su supervivencia (Zobel et al 2000) Asiacute la colonizacioacuten de una zona sin vegetacioacuten depende en primer lu-gar de la llegada de semillas por dispersioacuten desde las zonas circundantes a traveacutes de distintos vectores como el viento el agua o los animales Una vez en la zona si esta presenta cierta pendiente aquellas especies cuyas semillas tienen mecanismos de fija-cioacuten que impiden ser arrastrados por la gravedad o el agua de escorrentiacutea tendraacuten maacutes posibilidades de mantenerse en las laderas que aquellas especies que no disponen de dichos mecanismos (Garciacutea-Fayos et al 2010) Posteriormente las semillas que resisten al arrastre han de encontrar una serie de condiciones favorables que les permitan germinar y desarrollarse hasta convertirse en un individuo

adulto Tras la fase de colonizacioacuten las interacciones entre plantas tanto a traveacutes de la facilitacioacuten de una especie por otra que le ayuda a establecerse (inte-raccioacuten positiva) o a traveacutes de la exclusioacuten de una especie por la presencia de especies competidoras (interaccioacuten negativa) implican cambios graduales en la composicioacuten floriacutestica de las comunidades

En definitiva la colonizacioacuten de una zona dada ndashy la comunidad de plantas resultantendash depende de tres grandes grupos de factores a) la disponibilidad de semillas b) las condiciones del medio y c) las inte-racciones planta-planta conocidos a su vez como los tres grandes lsquofiltros ecoloacutegicosrsquo que determinan el ensamblaje de las especies

2 Filtros ecoloacutegicos que determinan la colonizacioacuten y el ensamblaje de las comunidades

De acuerdo con la teoriacutea de ensamblaje de las especies (assembly rules en ingleacutes) solo aque-llas pertenecientes al conjunto o pool de especies locales capaces de atravesar una serie de filtros

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podraacuten establecerse con eacutexito en una zona deter-minada (Keddy 1992 Weiher y Keddy 1999 Figu-ra 1) Mediante un proceso de seleccioacuten a traveacutes de sucesivos filtros el tamantildeo del pool de es-pecies locales se ve progresivamente reducido a un subconjunto de especies del pool original La seleccioacuten de las especies se hace en funcioacuten de sus rasgos morfoloacutegicos y funcionales que defi-nen su capacidad para alcanzar la zona por dis-persioacuten (filtro de la dispersioacuten) para adaptarse a las condiciones del medio (filtro de los factores abioacuteticos) y para competir con las demaacutes plantas establecidas (filtro de las interacciones bioacuteticas) (Keddy 1992 Weiher y Keddy 1999)

A medida que van entrando las especies en la comunidad (pool actual) y transcurre la sucesioacuten

la intensidad e influencia relativa de los filtros va cambiando Mientras que la dispersioacuten y los factores abioacuteticos tienen un mayor peso en las primeras etapas de la sucesioacuten las interacciones planta-planta van adquiriendo una mayor impor-tancia en etapas maacutes tardiacuteas (Figura 1) Estos bu-cles de retroalimentacioacuten inherentes al sistema hacen que los filtros sean dinaacutemicos y que el tamantildeo de sus mallas se esteacute reajustando con-tinuamente (Fattorini y Halle 2004 Figura 1) No obstante el dinamismo de los filtros y las pertur-baciones externas que sufren continuamente los sistemas (contaminacioacuten erosioacutenhellip) hacen que la trayectoria del sistema no sea unidireccional y predecible sino que admite muacuteltiples trayecto-rias hacia estados alternativos estables (Temper-ton et al 2004 Figura 1)

III IDENTIFICACIOacuteN DE PROCESOS Y FACTORES QUE CONTROLAN EL ENSAMBLAJE DE LAS ESPECIES EN COMUNIDADES DE TALUDES DE INFRAESTRUCTURAS LINEALES

A partir de la teoriacutea de los filtros y de estudios re-cientes sobre la flora los patrones de colonizacioacuten y las caracteriacutesticas de las plantas de las comuni-dades de taludes identificamos a continuacioacuten los factores y procesos que controlan el ensamblaje de las especies en dichas comunidades La mayoriacutea de estos estudios hacen referencia a sistemas de taludes de carreteras de distintas regiones de la Peniacutensula Ibeacuterica

1 Disponibilidad de semillas

a Dispersioacuten

La colonizacioacuten espontaacutenea de los taludes de infra-estructuras lineales al igual que de otros ecosiste-mas fuertemente perturbados y desprovistos de ve-getacioacuten (volcanes minas a cielo abierto) depende en gran medida de la presencia en sus proximida-des de zonas de vegetacioacuten natural que suministran semillas (del Moral y Wood 1993 Kirmer y Mahn 2001 Novaacutek y Prach 2003 Bochet et al 2007a) Habitualmente la llegada por dispersioacuten de las se-millas desde las zonas de vegetacioacuten circundante (pool externo de especies locales Figura 1) cons-tituye la uacutenica fuente potencial de colonizacioacuten (se habla entonces de lsquosucesioacuten primariarsquo) Sin embargo en taludes recubiertos con una capa de tierra vege-tal esta constituye una fuente alternativa de semi-llas que pueden iniciar la colonizacioacuten (pool interno de especies locales Figura 1 se habla entonces de

lsquosucesioacuten secundariarsquo) No obstante estudios recien-tes demuestran que esta fuente de semillas es esca-sa con las praacutecticas actuales de manejo de la tierra vegetal utilizadas para la restauracioacuten de taludes (Mola et al 2011)

El eacutexito de llegada de las semillas a los taludes de-pende en gran medida de la distancia entre estos y las manchas circundantes de vegetacioacuten natural asiacute como de la capacidad de las especies locales para dispersarse a larga distancia (Figuras 2 y 3)

Figura 3 Terrapleacuten con orientacioacuten sur de la autopista Andash7 en la Costa del Sol entre las localidades de Estepona y Torreguadiaro En la foto se observa la cercaniacutea del talud a una mancha de vegetacioacuten natural consistente en matorrales de Chamaerops humilis y Pistacia lentiscus (Foto Santiago Soliveres Codina)

bull Distancia a la fuente de semillas

Es bien sabido que la probabilidad de las semillas de alcanzar una zona determinada es inversamente proporcional a la distancia a la fuente de semillas (Wilson 1993) Por ejemplo en una zona de vertede-ros mineros del Este de Alemania Saumlnger y Jetschke (2004) determinan que el porcentaje de especies co-munes entre el vertedero y las zonas circundantes de vegetacioacuten natural disminuye gradualmente (del 48 al 9) a medida que la distancia de estas uacuteltimas al vertedero aumenta (de 50 a 2000 m respectiva-mente) Bochet et al (2007a) llegan a conclusiones similares en un estudio realizado en taludes de la Autoviacutea Andash3 en la Comunidad Valenciana Estos au-tores sugieren que la colonizacioacuten se inicia a par-tir de los campos de cultivo y parches de matorral cercanos situados a menos de 150 m de distancia de los taludes No obstante no todas las especies

Estreacutes ambiental

Especiacioacuten migracioacuten

Perturbacioacuten

Filtro de dispersioacuten

Pool actual

Pool dispersivo

Pool ambiental

Pool interno de especiesPool externo de especies locales

Figura 1 Modelo dinaacutemico de los filtros que controlan el proceso de ensamblaje de las especies en una comunidad de plantas Modificado a partir de Fattorini y Halle (2004) Los procesos a gran escala como la especiacioacuten y la migracioacuten determinan el pool de especies locales que lsquoesperan a las puertasrsquo de una comunidad de plantas Para poder formar parte de un pool de especies establecidas (estado actual de la comunidad) las nuevas especies tienen que ser capaces de llegar [bien por dispersioacuten desde las zonas adyacentes (pool externo de especies locales) bien por estar presentes en el banco de semillas del suelo (pool interno de especies)] de adaptarse a las condiciones del medio (filtro abioacutetico) y tambieacuten de competir con las demaacutes especies establecidas (filtro bioacutetico) Los distintos filtros dependen unos de otros al estar conectados entre siacute a traveacutes del pool de especies establecidas Por ello los filtros tienen un caraacutecter dinaacutemico y el tamantildeo de su malla es constantemente reajustado como consecuencia de la existencia de procesos internos de retroalimentacioacuten asiacute como de la posible inter-vencioacuten de elementos externos al sistema (perturbaciones y estreacutes) Por ejemplo si las mallas del filtro abioacutetico lsquose abrenrsquo como consecuencia de las modificaciones de las condiciones del medio a medida que transcurre la sucesioacuten dejaraacute paso a un mayor nuacutemero de especies y consecuentemente el filtro bioacutetico tenderaacute a lsquocerrarsersquo al verse reducida la superficie de espacios disponibles para la llegada de semillas y posterior establecimiento de nuevas plaacutentulas Al contrario unas condiciones ambientales extremas provocaraacuten el cierre praacutecticamente total del filtro abioacutetico a la vez que se abriraacute el filtro bioacutetico por la falta de competencia entre las pocas especies establecidas capaces de soportar las condiciones adversas del medio

Filtro abioacutetico

Filtro bioacutetico

Figura 2 Terrapleacuten con orientacioacuten sur de la autopista Andash5 en la provincia de Madrid en la localidad de Arroyomolinos En la foto se observa en primer teacutermino el talud objeto de estudio y en segundo la cercaniacutea a una mancha de vegetacioacuten natural consistente en una dehesa de Retama sphaerocarpa (Foto Pablo Garciacutea-Palacios)

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MIRMECOCORIA

Ejemplos de dispersioacuten de semillas yo frutos (diaacutesporas) por hormigas (mirmecocoria) De izquierda a dere-cha y de arriba abajo hormiga negra (Messor barbarus) transportando un fruto de cadillo (Medicago sp) un fruto de bolsa de pastor (Capsella bursa-pastoris) una semilla de avena (Avena sp) un fruto de lechetrezna (Euphorbia helioscopia) y abajo transportando una semilla de plaacutetano (Platanus occidentalis) A la izquierda en esta uacuteltima imagen se puede apreciar a varias hormigas sobre un fruto de caracolillo (Medicago orbicularis) Autor Ignacio Mola

ANEMOCORIA

Capiacutetulo fructificado de Diente de Leoacuten (Taraxacum sp) Se puede apreciar coacutemo los frutos (cipselas) poseen un penacho plumoso (vilano) que permite su arrastre por el viento (anemocoria) y dispersarse a largas distancias Autor Ignacio Mola

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presentes en la vegetacioacuten circundante tienen meca-nismos de dispersioacuten adecuados para alcanzar las laderas de los taludes

bull Mecanismos de dispersioacuten

En el estudio previamente citado Bochet et al (2007a) determinan que solo el 60 de las especies presentes en las aacutereas de vegetacioacuten natural a me-nos de 150 m de los taludes son capaces de alcan-zarlos por dispersioacuten En Finlandia se han descrito patrones similares para taludes de carretera y viacuteas de tren rodeados por herbazales naturales (Tikka et al 2001)

Ademaacutes en una amplia gama de haacutebitats se ha constatado que las especies cuyas semillas son dis-persadas a larga distancia por el viento (anemoacuteco-ras) o por los animales (zooacutecoras excepto las dis-persadas por hormigas) tienen maacutes probabilidades de colonizar nuevas aacutereas que aquellas especies con mecanismos de dispersioacuten a corta distancia (disper-sadas por hormigas o lsquomirmecoacutecorasrsquo o dispersadas por la fuerza de la gravedad o lsquobaroacutecorasrsquo) (Hardt y Forman 1989 Dzwonko y Loster 1992 Burke y Grime 1996 Campbell et al 2003 Martiacutenez-Ruiz y Marrs 2007) La dispersioacuten de las semillas por el viento ha demostrado ser el mecanismo maacutes eficaz a la hora de colonizar los taludes de carretera Asiacute la propor-cioacuten de especies anemoacutecoras presentes en los talu-des es notablemente superior a la que se encuentra en las zonas de vegetacioacuten natural proacuteximas al talud y que ejercen como fuente de semillas (Bochet et al 2007a veacutease apartado III4 Tabla 3) Al contrario de lo esperado las especies zooacutecoras tienen pocas pro-babilidades de alcanzar los taludes Estos represen-tan ambientes inhoacutespitos para muchos animales puesto que estaacuten continuamente expuestos al ruido del traacutefico estaacuten vallados (para garantizar la seguri-dad vial) y carecen de aacuterboles que podriacutean servir de posaderos para los paacutejaros En cuanto a las especies que carecen de mecanismos de dispersioacuten a larga distancia su probabilidad de llegar al talud aunque baja aumenta con el tiempo (van Dorp et al 1997 Kirkman et al 2004)

En resumen al igual que en otros ambientes la dis-persioacuten representa un filtro que limita la disponibili-dad de semillas para la colonizacioacuten a corto o medio plazo de los taludes Solo las especies maacutes cercanas

a los taludes o capaces de dispersarse a mayores distancias tienen posibilidades de colonizar estas laderas de forma raacutepida

b Fijacioacuten(arrastredesemillas)

Distintos trabajos demuestran que el empobreci-miento de la vegetacioacuten en zonas caracterizadas por fuertes pendientes y procesos de erosioacuten intensos puede ser debido a la peacuterdida de semillas por es-correntiacutea y erosioacuten (Chambers y MacMahon 1994 Garciacutea-Fayos y Cerdagrave 1997) En pequentildeas cuencas abarrancadas del interior de Alicante las tasas anua-les de peacuterdida de semillas alcanzan un 13 (Garciacutea-Fayos et al 1995) Dado que la relacioacuten entre las peacuterdidas de semillas y la erosioacuten es exponencial (Garciacutea-Fayos 2004) la ocurrencia de eventos ex-traordinarios de lluvia durante el periodo de disper-sioacuten de las semillas podriacutea dificultar la regeneracioacuten de la vegetacioacuten en laderas sometidas a procesos de erosioacuten intensos como los taludes de infraestructu-ras lineales (veacutease Capiacutetulo 2)

Las caracteriacutesticas de las semillas tambieacuten influyen en su capacidad de resistir al arrastre por la erosioacuten Asiacute la segregacioacuten de una sustancia mucilaginosa que pega las semillas al suelo cuando se humede-cen disminuye notablemente la susceptibilidad de su arrastre por erosioacuten cuando su peso es inferior a 1 mg (Garciacutea-Fayos et al 2010)

2 Suelo (filtro abioacutetico)

a Importanciarelativadelosfiltrosdisponibilidaddesemillasfrenteacondicionesabioacuteticas

Aunque la colonizacioacuten de los taludes puede verse limitada por la restringida capacidad de dispersioacuten o de fijacioacuten al suelo de algunas especies distin-tos estudios han puesto de manifiesto la prepon-derancia del filtro abioacutetico frente al filtro de la dis-ponibilidad de semillas (dispersioacuten y fijacioacuten) Estos estudios demuestran que aunque las semillas de muchas especies son capaces de llegar a los taludes una serie de limitaciones ambientales intriacutensecas a estas laderas impiden su germinacioacuten o el estableci-miento de las plaacutentulas (Alborch et al 2003 Tormo et al 2006 Figura 4)

Figura 4 Experimento de adicioacuten de semillas en terraplenes de la Autoviacutea Andash3 a su paso por Requena (Comunidad Valenciana) que demuestra la preponderancia del filtro abioacutetico frente al filtro de la dispersioacuten Modificado a partir de Tormo et al 2006 Este experimento se basa en la idea de que si se antildeaden semillas de especies que no estaacuten presentes previamente en el talud pero siacute en su cercaniacutea y estas se estable-cen la limitacioacuten por la disponibilidad de semillas seriacutea maacutes importante para explicar su ausencia en dicho haacutebitat que la limitacioacuten por las condiciones del haacutebitat estudiado Se representa el porcentaje de establecimiento obtenido tras una siembra manual a pequentildea escala para un conjunto de especies ausentes de los taludes aunque presentes en las zonas circundantes de vegetacioacuten natural (especies lsquono exitosasrsquo en la colonizacioacuten espontaacutenea de los taludes) y para un conjunto de especies colonizadoras de los taludes que sirven de control (especies lsquoexitosasrsquo) Los resultados indican que a pesar de la siembra que asegura la llegada en una misma proporcioacuten de las semillas de todas las especies al talud las especies no exitosas muestran unas tasas de establecimiento mucho maacutes bajas que las especies exitosas (excepto para Mm y Pa) Estos resultados sugieren que los procesos posdispersivos (germinacioacuten y establecimiento de plaacutentulas) que dependen funda-mentalmente de las condiciones abioacuteticas tienen un papel maacutes limitante en la colonizacioacuten de los taludes que los procesos de dispersioacuten y de fijacioacuten de las semillas

b Condicionesgeneralesdelsuelodeterraplenesydesmontes(veacuteasetambieacutenCapiacutetulo4)

Las condiciones generales del suelo de los taludes habitualmente poco favorables al establecimiento de la vegetacioacuten representan el filtro abioacutetico funda-mental que condiciona en gran medida los resul-tados de la colonizacioacuten natural En la Tabla 1 se presentan datos de algunos paraacutemetros del suelo relevantes para el establecimiento de la vegetacioacuten

que han sido medidos en sistemas de taludes de distintas zonas de la Peniacutensula Ibeacuterica Dichas zo-nas corresponden a la autopista Andash7 a su paso por la Costa del Sol (Maacutelaga) con inviernos suaves y precipitaciones relativamente altas autoviacutea Andash3 a su paso por la zona de Requena (Valencia) con un clima continental y notable aridez y las carreteras Mndash12 y Mndash13 en la Comunidad de Madrid con un clima me-diterraacuteneo continental y una precipitacioacuten intermedia en relacioacuten con las anteriores

Ab- Avena barbata

Bu- Bromus rubens

Bd- Bromus diandrus

Ac- Anacyclus clavatus

Mm- Medicago minima

Pa- Plantago albicans

Be- Brachypodium retusum

Sc- Santolina chamaecyparissus

Mo- Medicago orbicularis

Gs- Genista scorpius

Pl- Plantago lanceolata

Ps- Plantago sempervirens

Porc

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+ e

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tiacutep

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Especies exitosas Especies no exitosas

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Ab Bu Bd Ac Mm Pa Be Sc Mo Gs Pl Ps

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Tabla 1 Principales caracteriacutesticas del suelo y de la vegetacioacuten de distintos sistemas de taludes de la Peniacutensula Ibeacuterica (media plusmn error estaacutendar) Datos de Mola et al (2011) para Madrid de Valladares y Alonso (2001) para Maacutelaga y de Bochet et al (2010a) para Valencia

MADRID (CARRETERAS Mndash12 Y Mndash13)

MAacuteLAGA (AUTOPISTA Andash7)

VALENCIA (AUTOVIacuteA Andash3)

PROPIEDADES DE LA ZONA

Clima

Piso climaacutetico1

Ombroclima1

Mesomediterraacuteneo

Semiaacuterido

Termomediterraacuteneo

Subhuacutemedo

Mesomediterraacuteneo

Seco-semiaacuterido

Precipitacioacuten (mmantildeo)

500 900 450

Litologiacutea Arcosas Areniscas arenas arcillas y limos (sustrato aacutecido)

Margas (sustrato calizo)

PROPIEDADES DEL TALUD

TERRAPLEacuteN (N = 6)

DESMONTE (N = 9)

TERRAPLEacuteN (N = 21)

DESMONTE (N = 18)

TERRAPLEacuteN (N = 4)

DESMONTE (N = 4)

Edad (antildeos) 0 0 2 2 8 8

Pendiente (deg) 321 plusmn 08 312 plusmn 03 297 plusmn 37 396 plusmn 58 317 plusmn 23 363 plusmn 26

Orientacioacuten (deg)Norte este sur y oeste

Norte este sur y oeste

Norte y sur Norte y sur Norte y sur Norte y sur

Longitud (m) 118 plusmn 04 175 plusmn 09 119 plusmn 41 94 plusmn 45

Tratamiento TV ninguno TVHS HS HS HS

PROPIEDADES DEL SUELO

Arena () 6372 plusmn 268 6537 plusmn 549 3812 plusmn 746 3645 plusmn 107

Limo () 2011 plusmn 215 2259 plusmn 375 2748 plusmn 502 3423 plusmn 607

Materia orgaacutenica () 0148 plusmn 0023 00069 plusmn 0006 744 502 133 plusmn 019 lt0752 plusmn 006

Ntotal

() 0016 plusmn 002 0008 plusmn 0001 004 002 0072 plusmn 0004 0068 plusmn 0001P

asimilable (P2O5

mg100 g)181 plusmn 025 111 plusmn 368 443 103 250 plusmn 152 048 plusmn 010

K+ (mg100 g) 178 plusmn 06 167 plusmn 26 103 679

Compactacioacuten (kPa) 60 plusmn 10 1560 plusmn 1180

PROPIEDADES DE LA VEGETACIOacuteN

Cobertura vegetal () 000 plusmn 000 000 plusmn 000 803 plusmn 159 222 plusmn 224 594 plusmn 233 74 plusmn 56

Nuacutemero de especies 000 plusmn 000 000 plusmn 000 571 plusmn 93 336 plusmn 90 103 plusmn 84 100 plusmn 99

Indican que las diferencias entre terraplenes y desmontes de una misma zona geograacutefica son estadiacutesticamente signifi-cativas para la variable considerada ( P le 005 P le 001) TV = recubrimiento del talud con tierra vegetal HS= hidrosiembra con mezclas estaacutendares de semillas comerciales 1 Seguacuten clasificacioacuten de Rivas Martiacutenez (1983) 2 Maacutes bajo que el nivel de deteccioacuten del meacutetodo de anaacutelisis utilizado

Desde el punto de vista de las propiedades quiacutemi-cas del suelo los niveles de macronutrientes (N P K) medidos en los distintos sistemas de taludes son muy bajos (Tabla 1) Los niveles de macro-nutrientes y de materia orgaacutenica (propiedad con importantes implicaciones en la estructuracioacuten del suelo y en la capacidad de eacuteste para retener el agua) son inferiores a los niveles registrados en las zonas de vegetacioacuten natural proacuteximas a los talu-des Por ejemplo Mola et al (2011) constatan que el contenido en nitroacutegeno y materia orgaacutenica en el suelo de los terraplenes y desmontes de las carre-teras Mndash12 y Mndash13 (Madrid) al finalizar la obra y tras la aplicacioacuten de tierra vegetal en el caso de los terraplenes (Tabla 1) fueron del orden de 10 veces menores que los registrados en pastizales y mato-rrales xerofiacuteticos locales (Acosta 2005 Peco et al 2006) Estas marcadas diferencias en la fertilidad del suelo entre los taludes y las zonas proacuteximas de vegetacioacuten natural podriacutean explicar al menos en parte la escasa adaptacioacuten de las especies del pool local a las condiciones adversas del suelo de los taludes

Asimismo cabe destacar que las condiciones abioacuteti-cas de los desmontes son mucho menos favorables para el establecimiento de la vegetacioacuten que las de los terraplenes Mola et al (2011) encontraron di-ferencias significativas en el contenido en materia orgaacutenica foacutesforo y nitroacutegeno (Tabla 1) entre terraple-nes y desmontes recieacuten construidos de similar pen-diente y orientacioacuten en las carreteras Mndash12 y Mndash13 Los valores fueron superiores en los terraplenes ex-cepto para el foacutesforo Estas diferencias se debieron principalmente al extendido de tierra vegetal en los terraplenes el cual sin embargo no suele realizarse en los desmontes Bochet et al (2010a) obtuvieron resultados similares 8 antildeos despueacutes de la finali-zacioacuten de la obra en taludes de la Autoviacutea Andash3 de similar orientacioacuten y pendiente mostrando niveles superiores de materia orgaacutenica foacutesforo asimilable y nitroacutegeno en los terraplenes en comparacioacuten con los desmontes (Tabla 1)

Ademaacutes como consecuencia de los diferentes ma-teriales de origen entre desmontes y terraplenes (roca madre sin meteorizar frente a material no consolidado acumulado respectivamente) el nivel de compactacioacuten del suelo es muy superior en los desmontes En los desmontes de la Autoviacutea Andash3 en la Comunidad Valenciana se han llegado a medir niveles medios de compactacioacuten altiacutesimos (1560 kPa) 25 veces superiores a los niveles medidos en terraplenes de similar pendiente y orientacioacuten de la

misma localidad (Tabla 1 Figura 5) En desmontes de 50deg de pendiente formados sobre gneis en una zona de clima atlaacutentico en Galicia Cano y Montalvo (2003) registraron niveles de compactacioacuten del sue-lo algo maacutes bajos (300-400 kPa) pero cercanos al umbral que determina la capacidad de las raiacuteces de muchas especies herbaacuteceas no cultivadas para pe-netrar en un sustrato (Basset et al 2005 Monsalve et al 2010)

Figura 5 Diferencias en la estructura del suelo de terraplenes y desmontes de la Autoviacutea Andash3 a la altura de Requena (Valencia) En los primeros centiacutemetros de profundidad el nivel de com-pactacioacuten del suelo es mayor en los desmontes El aporte de materia orgaacutenica al suelo por las plantas (hojarasca y raiacuteces) confiere una mayor estructura al suelo de los terraplenes (Foto Esther Bochet)

c Disponibilidaddeaguaenelsuelo

El agua en el suelo y su disponibilidad para las plantas merece una mencioacuten especial dada su relevancia en las dos fases maacutes criacuteticas de la colo-nizacioacuten la germinacioacuten y la supervivencia de las plaacutentulas en las primeras etapas posgerminativas

En los taludes de zonas semiaacuteridas donde la dis-ponibilidad de agua es reducida (excepto en los te-rraplenes mejor orientados) se ha encontrado una relacioacuten consistente entre el eacutexito colonizador de las especies y la capacidad de estas para germinar raacute-pidamente en condiciones de estreacutes hiacutedrico (Bochet et al 2007b) Asiacute las especies capaces de colonizar espontaacuteneamente y de forma abundante los talu-des de la Autoviacutea Andash3 en la zona de Requena son aquellas que han demostrado tener la mayor tasa y velocidad de germinacioacuten en condiciones de estreacutes hiacutedrico (Figura 6)

TERRAPLEacuteN DESMONTE

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Figura 6 Tasa (barras) y velocidad (liacuteneas nuacutemero de diacuteas hasta observar la primera germinacioacuten) de germinacioacuten en diferentes condiciones de estreacutes hiacutedrico de especies lsquoexitosasrsquo y lsquono exitosasrsquo en la colonizacioacuten espontaacutenea de los taludes Cuanto maacutes negativo es el potencial hiacutedrico mayor es el estreacutes Las especies exitosas muestran mayores tasas y velocidades de germinacioacuten que las especies no exitosas Modi-ficado a partir de Bochet et al 2007b

La distribucioacuten de la precipitacioacuten en el tiempo tam-bieacuten puede influir en el eacutexito de establecimiento de las especies anuales colonizadoras de taludes Asiacute Espigares y Peco (1993 1995) pusieron de manifies-to en un estudio sobre un amplio grupo de espe-cies arvenses de pastizal mediterraacuteneo respuestas diferentes en funcioacuten del momento en que se pro-duciacutean las precipitaciones otontildeales (Figura 7) Dado que muchas de estas especies son comunes en los taludes sobre sustratos aacutecidos en Madrid (Tabla 1) y que las comunidades de taludes suelen estar domi-nadas por especies anuales (veacutease apartado III4) la

respuesta de las plantas a la distribucioacuten temporal de la precipitacioacuten otontildeal podriacutea ser en gran me-dida responsable de las importantes fluctuaciones interanuales que se registran en la composicioacuten flo-riacutestica de estos ecosistemas en ambientes medite-rraacuteneos semiaacuteridos En un estudio a largo plazo (16 antildeos) Peco et al (2009) concluyeron ademaacutes que el peso de la semilla es un buen descriptor de la respuesta de las especies anuales a la precipitacioacuten y temperatura Asiacute las especies con semillas maacutes pesadas presentan ventajas en los antildeos con otontildeos poco lluviosos

Grupo 1 Grupo 2 Grupo 3

100 100 100

g

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inac

ioacuten

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g

erm

inac

ioacuten

0 0 00 1 2 3 4 5 0 1 2 3 4 5 0 1 2 3 4 5

Tiempo (semanas) Tiempo (semanas) Tiempo (semanas)

Figura 7 Experimento en caacutemara de cultivo que pone de manifiesto las distintas respuestas en el tiempo de un amplio grupo de especies arvenses a la distribucioacuten de la precipitacioacuten otontildeal Tratamientos Lluvias otontildeales tempranas lluvia con temperatura y fotoperiacuteodo de sep-tiembre (liacutenea roja) Lluvias otontildeales tardiacuteas lluvia con temperatura y fotoperiacuteodo de noviembre (liacutenea azul) Los resultados indican que en los antildeos con lluvias tempranas en el otontildeo se ven favorecidas las especies del grupo 2 mientras que en otontildeos tardiacuteos se ven favorecidas las del grupo 3 El grupo 1 es poco sensible a estos cambios en la distribucioacuten de la precipitacioacuten con tasas de germinacioacuten elevadas para ambos tratamientos A partir de Espigares y Peco (1993)

Porc

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erm

inac

ioacuten

Potencial hiacutedrico del suelo (MPa)

Exitosa

No exitosa

0 20

40

60

80

10

0

0 -001 -005 -035

0 15

30

En cuanto a la supervivencia de las plaacutentulas tras la germi-nacioacuten Espigares y Peco (1995) determinaron que algunas

especies del experimento de la Figura 7 son particular-mente sensibles a una sequiacutea posgerminativa (Tabla 2)

Aira caryophyllea

Crepis virens

Vulpia ciliata

Capsella rubella

Crassula tillaea

Sagina apetala

Trifolium dubium

Vulpia muralis

Geranium molle

Tuberaria guttata

Galium murale

Myosotis stricta

Myosotis discolor

Anthyllis cornicina

Leontodon taraxa-coides

Galium parisiene

Spergularia purpurea

Andryala integrifolia

Bromus madritensis

Spergula pentandra

Crepis taraxacifolia

Trifolium tomentosum

Bromus hordeaceus

Plantago coronopus

Lathyrus angulatus

Vulpia unilateralis

Trifolium campestre

Aphanes microcarpa

Cerastium glomeratum

Papaver hybridum

Evax carpetana

Logfia gallica

Veronica arvensis

Biserrula pelecinus

Hypochoeris glabra

Poa annua

Trifolium cherleri

Plantago afra

Vicia lathyroides

Vulpia myuros

Campanula erinus

Logfia minima

Mibora minima

Stellaria media

Taeniatherum caput-medusae

Filago pyramidata

Trifolium glomeratum

Asteriscus aquaticus

Carduus tenuiflorus

Centaurea melitensis

Trifolium arvense

Erodium cicutarium

Trifolium cernuum

Vulpia membranacea

Corynephorus fasciculatus

Sisymbrium runcinatum

Polycarpon tetraphyllum

Cerastium brachypetalum

Arenaria leptoclados

Trifolium scabrum

Trifolium striatum

Bromus tectorum

Plantago loeflingii

Lophochloa cristata

Cerastium semidecandrum

Medicago minima

Trifolium gemellum

Scandix australis

Trifolium suffocatum

115114

Proc

esos

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oacuten d

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IacuteNDICE

Tabla 2 Listado de especies sensibles a las sequiacuteas posgerminativas A partir de Espigares y Peco (1995) Experimento en caacutemara de cultivo para simular el efecto de una sequiacutea postgerminativa en la tasa de mortalidad (media plusmn error estaacutendar) de plaacutentu-las de herbaacuteceas anuales En la tabla aparece la mortalidad en macetas con sequiacutea posger-minativa frente al control con riego continuo En todos los casos en que hubo diferencias significativas la mortalidad fue menor en los controles

TRATAMIENTOS

ESPECIES CONTROL SEQUIacuteA P

Aphanes microcarpa 004 plusmn 001 065 plusmn 006

Arenaria leptoclados 008 plusmn 005 040 plusmn 009

Biserrula pelecinus 015 plusmn 004 044 plusmn 009

Bromus hordeaceus 000 plusmn 000 056 plusmn 019

Cerastium semidecandrum 008 plusmn 005 059 plusmn 008

Galium murale 008 plusmn 008 073 plusmn 009

Galium parisiense 019 plusmn 006 087 plusmn 004

Hypochoeris glabra 000 plusmn 000 054 plusmn 014

Polycarpon tetraphyllum 000 plusmn 000 041 plusmn 013

Sagina apetala 001 plusmn 001 077 plusmn 005

Spergularia purpurea 004 plusmn 005 051 plusmn 007

Trifolium arvense 000 plusmn 000 070 plusmn 018

Trifolium glomeratum 000 plusmn 000 086 plusmn 001

Trifolium suffocatum 002 plusmn 002 056 plusmn 009

Veronica arvensis 002 plusmn 001 052 plusmn 009

Vulpia ciliata 004 plusmn 001 033 plusmn 007

Vulpia membranacea 000 plusmn 000 080 plusmn 005

Vulpia muralis 002 plusmn 001 034 plusmn 007

Vulpia myuros 003 plusmn 001 048 plusmn 010

P le 005 P le 001

En resumen las malas condiciones del suelo de los taludes tanto quiacutemicas fiacutesicas como hidroloacutegicas confieren al filtro abioacutetico un papel fundamental en el ensamblaje de las especies de las comunidades de plantas de estas laderas Ademaacutes el caraacutecter maacutes

limitante del suelo de los desmontes en compara-cioacuten con el de los terraplenes queda reflejado en la menor cobertura vegetal y nuacutemero de especies regis-trados en los desmontes al poco tiempo de finalizar la obra (Tabla 1 Figura 8)

Figura 8 Diferencias en la densidad de cobertura vegetal al-canzada en un desmonte (izquierda) y un terrapleacuten (derecha) proacuteximos a la Autoviacutea Andash3 (Requena Valencia) Las diferencias se deben principalmente a la orientacioacuten (norte en este caso concreto) y condiciones del suelo maacutes favorables para el estab-lecimiento de las plantas en el terrapleacuten El establecimiento de las plantas en el desmonte orientado hacia el sur es praacutectica-mente nulo (Foto Esther Bochet)

3 Interacciones planta-planta (filtro bioacutetico)

a Importanciarelativadelosfiltroscondicionesabioacuteticasfrenteacondicionesbioacuteticas

Mientras que en ambientes semiaacuteridos con una re-ducida disponibilidad hiacutedrica para las plantas las condiciones abioacuteticas constituyen inicialmente el filtro maacutes importante a la hora de estructurar la composicioacuten floriacutestica de las comunidades de talu-des en ambientes climaacuteticos maacutes benignos son las interacciones entre plantas las que desempentildean un papel primordial Valladares et al (2008) emplea-ron una aproximacioacuten basada en la filogenia y en el anaacutelisis de rasgos funcionales de las especies (Webb et al 2002) para comparar las comunidades vegetales establecidas en los taludes de carretera de Maacutelaga (clima mediterraacuteneo benigno Tabla 1) y Valencia (clima mediterraacuteneo adverso Tabla 1) Dicho estudio sugiere la existencia de repulsioacuten fe-notiacutepica y por lo tanto exclusioacuten competitiva en las comunidades vegetales de los taludes de carre-tera de Maacutelaga Al contrario en las comunidades de Valencia sometidas a un alto estreacutes ambiental se aprecia una atraccioacuten fenotiacutepica entre las es-pecies coexistentes al compartir muchas de ellas unos mismos rasgos que les confieren la capacidad necesaria para poder establecerse en esos ambien-tes adversos

b Competenciafrenteafacilitacioacuten

Hasta la fecha existe poca informacioacuten sobre la natu-raleza de las interacciones planta-planta que se pro-ducen en las comunidades de taludes asiacute como sobre su importancia relativa (facilitacioacuten frente a compe-tencia) en el ensamblaje de las especies de dichas comunidades Dado que se ha descrito que la impor-tancia relativa de la competencia frente a la facilita-cioacuten disminuye a medida que aumenta el estreacutes abioacute-tico (Bertness y Callaway 1994 Maestre et al 2009) cabe esperar una elevada frecuencia de interacciones positivas en los ecosistemas de taludes al menos en las condiciones abioacuteticas maacutes limitantes para el esta-blecimiento de las plantas (por ejemplo clima aacuterido o semiaacuterido sustratos pobres y compactados)

4 El producto final del proceso de filtrado las especies colonizadoras y sus rasgos funcionales

Finalmente las especies que consiguen superar con eacutexito los sucesivos filtros que controlan el ensam-blaje de las especies constituyen el pool de especies colonizadoras de los taludes cuyos rasgos funciona-les reflejan su capacidad para llegar germinar esta-blecerse y competir en el talud

a Pooldeespeciesdelostaludes

Un estudio sinteacutetico sobre la flora y la ecologiacutea de las comunidades de taludes de las zonas de Maacutelaga (Autopista Andash7) Valencia (Autoviacutea Andash3) y Madrid (Ra-dial Rndash4 Autopista APndash36 y Autoviacutea Andash5) sentildeala que de forma general estas comunidades son muy ricas en especies y estaacuten compuestas por plantas her-baacuteceas principalmente (Valladares et al 2004) Sus valores de diversidad llegan a alcanzar los maacuteximos registrados en herbazales y pastizales de la Peniacutensu-la Ibeacuterica (Figura 9) Aunque las comparaciones entre haacutebitats basaacutendose en datos de diversidad o riqueza estaacuten sujetas a limitaciones y no son directamente comparables entre siacute los datos obtenidos en dicho estudio y otros (Garantildeeda-Bermejo et al 2002 Tena 2006 Garciacutea-Palacios et al datos no publicados) nos indican que transcurrido un tiempo relativamen-te pequentildeo las comunidades que se instalan de for-ma espontaacutenea en los taludes son ricas en especies lo que cuestiona la necesidad de introducir especies aloacutectonas como las que se seleccionan habitualmen-te en las hidrosiembras (veacutease apartado IV3) Ade-maacutes esta diversidad aumenta progresivamente con el tiempo (Tena 2006 Garciacutea-Palacios et al datos no publicados Figura 10)

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IacuteNDICE

Figura 9 Iacutendice de diversidad floriacutestica (iacutendice de Shannon) de distintas comunidades de herbazales y pastizales de la Peniacutensula Ibeacuterica En rojo se destacan los valores promedio para herbazales de taludes de carreteras estudiadas por nosotros en Maacutelaga y Madrid Extraiacutedo de Valladares et al 2004

La mayoriacutea de las especies de las comunidades de taludes de Maacutelaga Madrid y Valencia estaacute presente en una sola de las tres localidades estudiadas (399 de un total de 587 especies) y tan solo el 10 es-taacuten presente en las tres localidades (Valladares et al 2004) No obstante estas uacuteltimas son las que maacutes abundancia media poseen a nivel local siendo las

menos abundantes las presentes en una sola loca-lidad Por ello aunque existan grandes diferencias desde el punto de vista de la composicioacuten floriacutestica entre las tres zonas en teacuterminos de dominancia re-lativa las diferencias son menores ya que tienden a predominar las mismas especies Muchas de ellas tambieacuten han sido encontradas de forma abundante

en otras comunidades de taludes de las provincias de Zamora y Madrid (Enriacutequez de Salamanca et al 2004) Salamanca (Martiacutenez-Ruiz et al 2003) y del sur de Francia (Heindl y Ullman 1991) en ambiente medi-terraacuteneo (pe Avena barbata Avena sterilis Bromus rubens Bromus tectorum Cichorium intybus Foenicu-lum vulgare Hordeum murinum Plantago albicans)

Figura 11 Segregacioacuten de inventarios por la composicioacuten floriacutestica en funcioacuten del tipo (Eje 1) y orientacioacuten (Eje 2) del talud Color azul terra-plenes color marroacuten desmontes colores oscuros norte colores claros sur Modificado a partir de Bochet y Garciacutea-Fayos 2004

A modo de ejemplo la Tabla 3 propone un listado de especies capaces de colonizar espontaacuteneamente con eacutexito unos taludes de la Autoviacutea Andash3 situados en la Comunidad Valenciana entre las localidades de El Rebollar y Venta del Moro Mientras que algunas especies tuvieron eacutexito en todos los taludes estu-diados en esta zona otras solo fueron capaces de establecerse en un tipo u orientacioacuten de talud

Eje 1

Eje

2

094

041

-012

-065

-118

-103 -029 045 119 193

Terrapleacuten norte

Desmonte norte

Terrapleacuten sur

Desmonte sur

Madrid Maacutelaga

1 2 3 4 5

Pastos mediterraacuteneos ecotono matorral (Madrid) Prados de siega huacutemedos (Picos de Europa)

Herbazales en taludes en carretera 4-16 antildeos (Madrid) Pastos en dehesa Quercus pyrenaica (Leoacuten)

Prados de siega huacutemedos (Pirineos) Pastizales en quejigares (Navarra)

Pastos semiaacuteridos (Salamanca) Herbazales en quejigares (Navarra)

Pastos en dehesa Quercus ilex semiagostantes (Salamanca) Pastos terofiacuteticos (Zamora)

Pastos psicroxerofiacuteticos (Salamanca) Espartales sobre calizas (Jaeacuten) Espartales sobre yesos (Jaeacuten)

Herbazales en taludes de carretera 2-3 antildeos (Maacutelaga) Pastizales vallicares (Salamanca)

Herbazales en taludes de carretera 1-2 antildeos (Maacutelaga) Prados de siega en zonas secas (Pirineos) Prados de siega muy manejados (Pirineos)

Prados de siega (Zamora)

Figura 10 Variacioacuten en la riqueza de especies en funcioacuten de la edad de las comunidades de dos sistemas distintos de taludes de carretera situados en las provincias de Madrid y Maacutelaga Datos de Garciacutea-Palacios et al (datos no publicados)

La composicioacuten floriacutestica de las comunidades tam-bieacuten variacutea entre terraplenes y desmontes y entre orientaciones norte y sur (Martiacutenez-Ruiz et al 2003 Bochet y Garciacutea-Fayos 2004) como consecuencia de

las distintas influencias relativas de los filtros eco-loacutegicos sobre las especies y sus rasgos funcionales (Figura 11)

Nordm

espe

cies

m2

Nordm

espe

cies

m2

18

16

14

12

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0

18

16

14

12

10

8

6

4

2

0

aa

a

b

b

b

Referencialt0-2 antildeos 7-9 antildeos 20 antildeos Referencialt0-2 antildeos 7-9 antildeos 20 antildeos

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IacuteNDICE

GEacuteNERO TRIFOLIUM

De las 60 especies de treacuteboles (Trifolium) descritas en Flora Ibeacuterica (Muntildeoz Rodriacuteguez et al 2000) 39 aparecen en el cataacutelogo de la flora de Madrid (Loacute-pez Jimeacutenez 2007) En 15 parcelas de muestreo en taludes de las autopistas M-12 y M-13 se han identificado 18 es decir el 25 de la riqueza ibeacuterica y maacutes del 46 de la de la Comunidad de Madrid Estas cifras ponen en evidencia lo diversificado de este geacutenero botaacutenico en la Peniacutensula Ibeacuterica y lo bien representado en la flora presente en los taludes de carretera Se presentan catorce especies de este geacutenero detectadas en taludes de carretera

Muntildeoz Rodriacuteguez A JA Devesa y S Talavera 2000 Trifolium in Castroviejo et al (Ed) Flora Ibeacuteri-ca Plantas vasculares de la Peniacutensula Ibeacuterica e Islas Baleares 7(2)646-719 CSIC Madrid

Loacutepez Jimeacutenez N 2007 Las plantas vasculares de la Comunidad de Madrid Cataacutelogo floriacutestico Claves dicotoacutemicas y estudio detallado de la familia Com-positae Giseke Tesis Doctoral Universidad Complu-tense de Madrid

De izquierda a derecha y de arriba abajo treacutebol blanco (Trifolium repens) treacutebol (T scabrum) treacutebol velloso (Trifolium hirtum) fenarda (T campestre) jopito (T angustifolium) pie de liebre (T arvense) siempreviva (T tomentosum) treacutebol (T glomeratum) y rabo de gato (T cherleri) Autor Ignacio Mola

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IacuteNDICE

Bajo estas liacuteneas de izquierda a derecha y de arriba abajo treacutebol (Trifolium strictum) estrella (T stella-tum) treacutebol (T cernuum) y treacutebol estriado (T stria-tum) En la paacutegina siguiente berrillo (T pratense) Autores Miguel Aacutengel Casado e Ignacio Mola

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IacuteNDICE

Tabla 3 Listado de especies con sus mecanismos de dispersioacuten respectivos que colonizan espontaacuteneamente y de forma abundante los distintos tipos de taludes de la Autoviacutea A3 situados entre las localidades de El Rebollar y Venta del Moro (Comunidad Valenciana) Esta zona se caracteriza por un clima continental semiaacuterido y un sustrato de margas calizas

ESPECIES DISPERSIOacuteN DS DN TS TN

Alyssum simplex Baroacutecora + + + +

Anacyclus clavatus Baliacutestica + + + +

Avena barbata Anemoacutecora + + + +

Bromus rubens Anemoacutecora + + + +

Centaurea aspera Zooacutecora + + + +

Cichorium intybus Baliacutestica + + + +

Convolvulus arvensis Baroacutecora + + + +

Diplotaxis erucoides Baroacutecora + + + +

Euphorbia serrata Mirmecoacutecora + + + +

Hordeum murinum subsp leporinum Anemoacutecora + + + +

Sonchus oleraceus Anemoacutecora + + + +

Scabiosa simplex Anemoacutecora + + + +

Bromus tectorum Anemoacutecora + + +

Crepis vesicaria Anemoacutecora + + +

Erodium cicutarium Baroacutecora + + +

Calendula arvensis Zooacutecora + +

Carduus pycnocephalus Anemoacutecora + +

Filago pyramidata Anemoacutecora + +

Medicago minima Zooacutecora + +

Plantago albicans Baroacutecora + +

Scorzonera laciniata Anemoacutecora + +

Silene nocturna Baliacutestica + +

Reseda phyteuma Baliacutestica + +

Pallenis spinosa Anemoacutecora + +

Eryngium campestre Anemoacutecora + +

Carthamus lanatus Anemoacutecora +

Crepis foetida Anemoacutecora +

ESPECIES DISPERSIOacuteN DS DN TS TN

Foeniculum vulgare subsp piperitum Baroacutecora +

Linaria simplex Baliacutestica +

Papaver rhoeas Baliacutestica +

Senecio gallicus Anemoacutecora +

Senecio vulgaris Anemoacutecora +

Avena sterilis Anemoacutecora +

Erodium ciconium Baroacutecora +

Erodium malacoides Baroacutecora +

Hirschfeldia incana Baroacutecora +

Reseda undata Baroacutecora +

Aegilops geniculata Zooacutecora +

Aegilops triuncialis Zooacutecora +

Genista scorpius Baroacutecora +

Santolina chamaecyparissus subsp squarrosa Baliacutestica +

b Rasgosfuncionalesdelasespeciescolonizadoras

Seguacuten predice la teoriacutea los rasgos funcionales de las especies colonizadoras de taludes deberiacutean re-flejar las aptitudes de las plantas para superar las barreras que controlan el ensamblaje de las especies en estas laderas (dispersioacuten fijacioacuten germinacioacuten establecimiento y competencia)

Las comunidades de taludes tiacutepicas de las primeras etapas sucesionales se caracterizan por poseer una alta proporcioacuten de especies anuales de crecimiento raacutepido de caraacutecter ruderal y arvense (Valladares et al 2004 Figura 12) Por ejemplo las comunidades de taludes de Maacutelaga estaacuten compuestas en los prime-ros antildeos por un 84 de especies anuales (teroacutefitas seguacuten la clasificacioacuten de Raunkiaer 1934) frente a un 11 de especies herbaacuteceas vivaces (hemicriptoacutefitas seguacuten la clasificacioacuten de Raunkiaer 1934) A su vez un 40 de las especies son ruderales y arvenses

Figura 12 Primeras etapas de la sucesioacuten en un terrapleacuten de la Autoviacutea Andash3 (Requena Valencia) Una de las especies pioneras de mayor eacutexito en la colonizacioacuten de este tipo de talud es la especie anual Diplotaxis erucoides (flor blanca) (Foto Esther Bochet)

frente a un 25 de especies propias de pastizales y herbazales nitroacutefilos (Matesanz et al 2004)

Tabla 3 Listado de especies con sus mecanismos de dispersioacuten respectivos que colonizan espontaacuteneamente y de forma abundante los distintos tipos de taludes de la Autoviacutea A3 situados entre las localidades de El Rebollar y Venta del Moro (Comunidad Valenciana) Esta zona se caracteriza por un clima continental semiaacuterido y un sustrato de margas calizas (Continuacioacuten)

DN desmonte norte DS desmonte sur TN terrapleacuten norte TS terrapleacuten sur Mecanismos de dispersioacuten anemoacutecora por el viento baroacutecora por la gravedad zooacutecora por los animales excepto por las hormigas mirmecoacutecoras por las hormigas baliacutesticas por lsquocatapultarsquo Modificado a partir de Bochet et al 2010b

DN desmonte norte DS desmonte sur TN terrapleacuten norte TS terrapleacuten sur Mecanismos de dispersioacuten anemoacutecora por el viento baroacutecora por la gravedad zooacutecora por los animales excepto por las hormigas mirmecoacutecoras por las hormigas baliacutesticas por lsquocatapultarsquo Modificado a partir de Bochet et al 2010b

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IacuteNDICE

Al igual que en otros ecosistemas degradados las especies pioneras en la colonizacioacuten de taludes de infraestructuras lineales se caracterizan tambieacuten por un sistema de dispersioacuten eficaz a larga distancia que les permite llegar desde las aacutereas circundan-tes de vegetacioacuten natural y de mecanismos de fi-jacioacuten al sustrato Asiacute en taludes de ocho antildeos de edad en la Autoviacutea Andash3 (Comunidad Valenciana) se ha observado una sobrerrepresentacioacuten de especies anemoacutecoras en relacioacuten con las zonas adyacentes de vegetacioacuten natural (Bochet et al 2007a Tabla 3) Tambieacuten en laderas erosionadas de una zona semiaacuterida de Teruel con caracteriacutesticas similares y

que comparten muchas especies con los desmontes de la Autoviacutea Andash3 estudiados en Valencia se han encontrado preferentemente especies capaces de dispersarse a larga distancia y de producir muciacutelago al contacto con el agua (Bochet et al 2009) Estas especies se distinguen de las de las zonas circun-dantes de vegetacioacuten natural que son incapaces de superar los filtros por su gran inversioacuten de recursos en la produccioacuten de semillas A medida que avanza la sucesioacuten cabe esperar que aumente la proporcioacuten de especies que disponen de estrategias de resis-tencia con una mayor inversioacuten por ejemplo en los oacuterganos subterraacuteneos (Guerrero-Campo et al 2008)

IV APLICACIOacuteN A LA RESTAURACIOacuteN

La restauracioacuten puede considerarse como un esfuerzo de manipulacioacuten consciente de los filtros ecoloacutegicos con el objetivo de acelerar o dirigir el proceso de coloniza-cioacuten vegetal (Figura 13) Por lo tanto la identificacioacuten de

La intervencioacuten activa sobre los filtros es necesaria cuando los procesos de colonizacioacuten transcurren demasiado lentamente para poder alcanzar en un plazo aceptable los objetivos de la restauracioacuten o cuando el sistema ha sobrepasado un umbral de irreversibilidad (Halle y Fattorini 2004) Este uacuteltimo determina la capacidad del sistema para recuperarse por siacute mismo La perturbacioacuten sufrida por los ecosistemas durante las obras es tal que en la mayoriacutea de los casos se supera el umbral de irreversibilidad

A continuacioacuten y sobre la base de los resultados obtenidos por distintos grupos de investigacioacuten se describen en distintos tipos de actuaciones que permiten contrarrestar el efecto de los filtros fa-voreciendo la entrada y el establecimiento de las plantas (Figura 13)

1 Proximidad y calidad de la vegetacioacuten natural circundante

La presencia de aacutereas de vegetacioacuten natural en la proximidad de los taludes que actuacutean como fuen-tes de semillas puede ayudar a paliar los efectos del filtro de la dispersioacuten puesto que favorece la entrada espontaacutenea de especies desde la vegeta-cioacuten circundante y acelera los procesos de coloni-zacioacuten en el talud Cuanto maacutes proacuteximos esteacuten los taludes de la matriz de vegetacioacuten circundante mayor seraacute la llegada y disponibilidad de semillas en el talud

Matesanz et al (2006) demuestran la efectividad de la colonizacioacuten espontaacutenea desde las zonas cercanas de matorral y cultivos en unos terraple-nes de la Autopista Andash7 en Maacutelaga con pendientes inferiores a 27deg suelos relativamente ricos y airea-dos y con un clima mediterraacuteneo subhuacutemedo Es-tos autores obtuvieron en terraplenes no tratados de reciente construccioacuten y al menos durante los dos primeros antildeos una cobertura vegetal y una riqueza de especies elevadas similares a las que se alcanzaron aplicando una hidrosiembra con una mezcla de especies comerciales (Figura 14)

los filtros ecoloacutegicos maacutes limitantes para el estableci-miento de la vegetacioacuten como paso previo a la toma de decisiones en un proyecto determinado es sumamente importante para el eacutexito de cualquier restauracioacuten

Pool local

Pool dispersivo

Pool actual

Limitaciones abioacuteticas

Incapaces de germinar y establecerse

Incapaces de llegar

Incapaces de competir

Adicioacuten de especies

Intervencioacuten en las interacciones bioacuteticas

Pool ambiental

- Aporte de tierra vegetal mulches fertilizantes enmiendas orgaacutenicas

- Cambios topograacuteficos

- Proximidad de la vegetacioacuten natural

- Aporte de tierra vegetal

- Seleccioacuten adecuada de especies para hidrosiembras plantaciones

- Eliminacioacuten de ganado

ENSAMBLAJE DE LAS ESPECIES Y FILTROS MANIPULACIOacuteN DE LOS FILTROS (RESTAURACIOacuteN)

Modificacioacuten del medio

Limitaciones bioacuteticas

Limitaciones por dispersioacuten

Figura 13 Proceso de seleccioacuten y ensamblaje de las especies en comunidades a traveacutes de los tres filtros ecoloacutegicos y posibles medidas de restauracioacuten mediante manipulacioacuten de dichos filtros Los rectaacutengulos representan los pools de especies los ciacuterculos los filtros y las flechas gruesas las posibles intervenciones del hombre para contrarrestar el efecto de los filtros

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Antildeo de seguimiento

A) B)

2003 2004Antildeo de seguimiento

Con hidrosiembra Sin hidrosiembra

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Nuacutem

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2003 2004

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eget

al (

)

Antildeo de seguimiento

A) B)

2003 2004Antildeo de seguimiento

Con hidrosiembra Sin hidrosiembra

Figura 14 Influencia de la hidrosiembra (frente a la restauracioacuten pa-siva) en la cobertura vegetal y riqueza de especies de terraplenes de la Autoviacutea Andash7 (Maacutelaga) No se aprecian grandes diferencias entre los tratamientos 2 y 3 antildeos tras la hidrosiembra (2003 y 2004 respec-tivamente) Modificado a partir de Matesanz et al 2006

A

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IacuteNDICE

La importante contribucioacuten de las manchas cir-cundantes de vegetacioacuten natural a la colonizacioacuten de los taludes tambieacuten queda reflejada en las Fi-guras 15 y 16 en las que se aprecian cambios en la composicioacuten floriacutestica de las comunidades de terraplenes de 0-2 7-9 y 20 antildeos de las au-topistas de Madrid y de Maacutelaga Los resultados

de este estudio (Garciacutea-Palacios et al datos no publicados) sugieren que la cercaniacutea de manchas formadas por dehesas de Retama sphaerocarpa en Madrid y matorrales de Chamaerops humilis y Ulex parviflorus en Maacutelaga constituye uno de los mo-tores principales para guiar la sucesioacuten de estas comunidades

Figura 15 Cambios en la composicioacuten floriacutestica en distintos taludes de Madrid (A) y Maacutelaga (B) de edades comprendidas entre 0 y 20 antildeos Tambieacuten se incluye la composicioacuten floriacutestica de la vegetacioacuten natural circundante llamada lsquoreferenciarsquo en ambas localidades (dehesa de Retama sphaerocarpa para Madrid y matorrales de Chamaerops humilis y Ulex parviflorus para Maacutelaga) Los dos ejes (CAP 1 y CAP 2) son el resultado de una ordenacioacuten (anaacutelisis canoacutenico de coordenadas principales) realizada para representar graacuteficamente la composicioacuten de la vegetacioacuten La distancia entre puntos representa la similitud en la composicioacuten floriacutestica Datos de Garciacutea-Palacios et al (datos no publicados)

Bochet et al (2007a) recomiendan que durante la ejecucioacuten de las obras se mantenga una banda de vegetacioacuten natural de al menos 20 m de ancho en la cabecera o al pie de los taludes Ademaacutes de tener implicaciones beneficiosas evidentes en el caso de la restauracioacuten pasiva estas medidas contribuyen tambieacuten a mejorar los resultados de los proyectos

de restauracioacuten activa acelerando el proceso de co-lonizacioacuten En caso de ausencia de vegetacioacuten natu-ral circundante o de llegada insuficiente de semillas al talud se pueden aplicar otras medidas que per-mitan incorporar las semillas de forma activa como la adicioacuten de tierra vegetal o la hidrosiembra (apar-tados IV2 y 3 respectivamente)

Figura 16 Cronosecuencia de terraplenes de distinta edad (de 0 a 20 antildeos) en diversas autopistas de las provincias de Madrid y Maacutelaga Las uacuteltimas dos fotos representan las zonas circundantes de vegetacioacuten natural una dehesa de Retama sphaerocarpa para Madrid y matorrales de Chamaerops humilis y Pistacia lentiscus para Maacutelaga (Fotos Santiago Soliveres Codina y Pablo Garciacutea-Palacios)

MADRID MAacuteLAGA

0-2

7-9

gt20

referencia

A B02

01

00

-01

-02

02

01

00

-01

-02

-02 -01 -01 00 00 01 01 02 02 -02 -01 -01 00 00 01 01 02 02

CAP1 CAP1

CA

P2

0-2 antildeos7-9 antildeos20 antildeosReferencialt

129128

Proc

esos

eco

loacutegi

cos

y re

stau

raci

oacuten d

e la

cub

ierta

vege

tal

IacuteNDICE

2 Mejora del suelo y banco de semillas

Las limitaciones abioacuteticas pueden ser suplidas mediante distintas teacutecnicas de restauracioacuten que consisten en la aplicacioacuten en los taludes de mul-ches (Brofas y Varelides 2000) fertilizantes (Pe-tersen et al 2004) enmiendas orgaacutenicas (de Ona y Osorio 2006) o tierra vegetal (Balaguer 2002) (veacutease Capiacutetulo 63) Entre las diferentes medidas

Un gran nuacutemero de estudios en ambientes de ca-racteriacutesticas muy diversas destaca los beneficios de esta teacutecnica para la restauracioacuten de taludes de infraestructuras lineales (Albaladejo et al 2000 Holmes 2001 Bowen et al 2005) Por ejemplo Tor-mo et al (2007) obtienen en taludes de la N-330 en Utiel (Valencia) que al menos durante los dos primeros antildeos las coberturas vegetales en terra-plenes en los que se ha aportado tierra vegetal son superiores que en terraplenes-control sin tierra vegetal (Figura 17) Las parcelas no tratadas tarda-ron tres antildeos en alcanzar valores medios de cober-tura vegetal equivalentes a los que se registraron el primer antildeo en las parcelas con tierra vegetal No obstante en esta regioacuten con condiciones climaacuteticas severas las coberturas vegetales alcanzadas en el primer antildeo tras la aplicacioacuten de la tierra vegetal (35) son insuficientes para poder garantizar un

No obstante el eacutexito de la aplicacioacuten de la tierra ve-getal puede ser muy variable dependiendo de su ma-nejo durante las operaciones de decapado acopio y extendido del suelo (Balaguer 2002) Mola et al (2011) demuestran que el aporte de semillas a los taludes mediante el banco natural de semillas conte-nido en la tierra vegetal es escaso con las praacutecticas actuales de manejo de la tierra vegetal y sugieren que la influencia positiva de la tierra vegetal en la revegetacioacuten de los taludes se debe en gran medida a la mejora de las condiciones abioacuteticas del sustrato

No obstante los estudios sobre la estructura y di-naacutemica de bancos de semillas en otros ambientes

proporcionan informaciones uacutetiles para un manejo maacutes adecuado de la tierra vegetal en los ambientes de taludes de carretera con repercusiones benefi-ciosas sobre el rendimiento del banco de semillas Por ejemplo Traba et al (2006) constatan en distin-tos ecosistemas de ambientes aacutecidos mediterraacuteneos que la mayoriacutea de las semillas viables se encuentran en los primeros 5 cm de profundidad del suelo (Fi-gura 19) Otros estudios realizados en ecosistemas deseacuterticos o en canteras de mineriacutea apoyan estas observaciones puntualizando que el 80-90 de las semillas viables se encuentran en la capa maacutes super-ficial del suelo es decir en los primeros 2 cm (Tacey y Glossop 1980 Kemp 1989)

existentes la adicioacuten de tierra vegetal presenta la ventaja antildeadida de ser capaz de contrarrestar al mismo tiempo el filtro de la dispersioacuten En efecto la tierra vegetal cumple la doble funcioacuten de a) mitigar las malas condiciones abioacuteticas del sue-lo por su mayor contenido en materia orgaacutenica y microorganismos y b) aportar semillas al talud mediante el banco natural de semillas contenido en el suelo

Figura 17 Influencia de la aplicacioacuten de tierra vegetal en la densidad de vegetacioacuten (media plusmn error tiacutepico) alcanzada a lo largo de 4 antildeos en parcelas experimentales en terraplenes de la carretera N-330 (Utiel Comunidad Valenciana) Los taludes se acabaron de construir en septiem-bre de 2003 P le 005 P le 001 ns diferencia no significativa estadiacutesticamente Modificado a partir de Tormo et al 2009

control eficiente de la erosioacuten en caso de lluvias intensas (Gyssels et al 2005 Bochet et al 2010a) En estas condiciones es aconsejable optar por un tratamiento que combina el aporte de tierra vegetal y la hidrosiembra de semillas de especies cuidado-samente seleccionadas para garantizar el eacutexito de la restauracioacuten (Bochet et al 2010a veacutease aparta-do IV3) Valladares et al (2004) tambieacuten ponen de manifiesto la eficacia de la tierra vegetal al menos durante los tres primeros antildeos en desmontes hi-drosembrados de baja pendiente (26deg) de la au-topista Andash7 (Maacutelaga) (Figura 18) Por otro lado el beneficio a largo plazo del aporte de tierra vege-tal ha sido evidenciado por Wali (1999) al obser-var 45 antildeos despueacutes del tratamiento un grado de evolucioacuten de la vegetacioacuten varias deacutecadas maacutes avanzado en taludes de mineriacutea tratados con tie-rra vegetal que en aquellos no tratados

Figura 18 El efecto de la adicioacuten de tierra vegetal en la cubierta vegetal en un desmonte hidrosembrado de la Autopista de la Costa del Sol (Maacutelaga) fue muy patente desde un principio asiacute como tres antildeos despueacutes del tratamiento La cobertura en las zonas con tierra vegetal fue muy superior a la de las zonas sin tierra vegetal durante todo el periodo de seguimiento (gt3 antildeos) Extraiacutedo de Valladares et al 2004

Hidrosiembra en desmonte lsaquo26deg

Superficie con y sin tierra vegetal

Autopista de la Costa del Sol

(Estepona Maacutelaga 2001-2002)

Vegetacioacuten en desmonte

Con tierra cobertura 100

Sin tierra cobertura 403 antildeos

d

e co

bertur

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con tierra vegetalsin tierra vegetal

80

60

40

20

0

ns ns ns

muestreos

may0 07juni0 04 juni0 05 juni0 06 may0 08

131130

Proc

esos

eco

loacutegi

cos

y re

stau

raci

oacuten d

e la

cub

ierta

vege

tal

IacuteNDICE

B

Nordm

sem

illas

Primavera 96 Otontildeo 96 Primavera 97

100

90

80

70

60

50

40

30

20

10

0

Primavera 96 Otontildeo 96 Primavera 97

A

Nordm

sem

illas

1800

1600

1400

1200

1000

800

600

400

200

0

Figura 19 Nuacutemero de semillas por sonda (16 cm2) en distintos ecosistemas de ambientes aacutecidos mediterraacuteneos (verde pastizales pastoreados azul matorrales sin pastoreo) Datos correspondientes a una superficie de muestreo de 320 cm2 (20 sondas de 16 cm2 en cada parcela) y una profundidad de suelo de 0-5 cm (graacutefica A) y de 5-10 cm (graacutefica B) Noacutetense las diferentes escalas de cada graacutefica Datos de Traba et al 2006

Por otro lado se ha constatado en ambientes medi-terraacuteneos que la cantidad de semillas viables en el banco del suelo presenta un ciclo anual con un maacutexi-mo durante el verano antes de que las primeras lluvias de otontildeo hayan provocado la germinacioacuten de la mayor parte de las anuales y un miacutenimo al prin-cipio de la primavera antes de que hayan producido semillas las especies vernales (Ortega et al 1997) Esta fluctuacioacuten es tanto mayor cuanto mayor es el grado de perturbacioacuten del sistema Asiacute por ejemplo

Figura 20 Media del nuacutemero de semillas viables en otontildeo y primavera en los 10 cm superficiales de suelo Las muestras fueron recogidas en parcelas pastoreadas de zonas altas y bajas de ladera a lo largo de un gradiente altitudinal en la Sierra de Guadarrama (Madrid) Extraiacutedo de Ortega et al 1997

Asimismo diversos estudios indican que el espesor del suelo influye en la germinacioacuten de las semillas con una profundidad oacuteptima igual o inferior a 2 cm (Andrade et al 1997 Torma y Hodi 2000 Traba et al 2004) Estos estudios demuestran que espesores de suelo excesivos superiores a 10 cm pueden incluso inhibir la germinacioacuten de las semillas o la emergen-cia de los brotes

En resumen estos datos indican que para conse-guir un rendimiento oacuteptimo del banco de semillas en la tierra vegetal se debe realizar un decapado superficial del terreno a desbrozar (de los primeros 5 cm en lugar de los 20-25 cm que recomiendan los proyectos) al final del verano y antes de las primeras lluvias y se debe aplicar una capa muy poco profunda de tierra vegetal (5 cm en lugar de los 30-35 cm que recomiendan los proyectos) No obstante se necesita una maquinaria apropiada para garantizar un decapado superficial del suelo

3 Seleccioacuten de especies adaptadas a las condiciones de la zona a restaurar

Para mitigar los efectos de una restringida disponibi-lidad de semillas y favorecer el proceso de sucesioacuten en los taludes se recurre muy frecuentemente a la adicioacuten antroacutepica de semillas mediante hidrosiembra (veacutease Capiacutetulo 74) Desafortunadamente las espe-cies seleccionadas para las hidrosiembras se limitan habitualmente a un reducido nuacutemero de especies disponibles en el mercado (especies comerciales) y que se recomiendan indiscriminadamente para cualquier escenario geograacutefico edaacutefico o climaacutetico (Balaguer 2002) Sin embargo el eacutexito de las hidro-siembras reside en gran medida en una seleccioacuten apropiada de las especies a sembrar Estas tienen que ser capaces de superar los filtros ecoloacutegicos que controlan su establecimiento en el talud Una vez superado el filtro de la dispersioacuten gracias a la hidro-siembra la incapacidad de muchas de las especies

cuando se comparan pastizales a lo largo de un gra-diente altitudinal de 500 a 1800 m en la vertiente sur de la sierra de Guadarrama se encuentra que los pastos dominados por anuales presentan una alta fluctuacioacuten intraanual que va desde 1300 semillas viables16 cm2 en otontildeo a 250 semillas a principios de primavera mientras que los pastos suprafores-tales presentan una fluctuacioacuten desde 300 semillas viables16 cm2 a 200 en las mismas eacutepocas del antildeo respectivamente (Figura 20)

Nordm

sem

illas

00

01 m

2

642 891 1215 1449 1719

Zona alta

Zona baja

Otontildeo

Primavera

Altitud (m)

15000

10000

5000

0

15000

10000

5000

0

133132

Proc

esos

eco

loacutegi

cos

y re

stau

raci

oacuten d

e la

cub

ierta

vege

tal

IacuteNDICE

incluidas en las mezclas de semillas comerciales de superar el filtro abioacutetico es una de las causas maacutes frecuentes de fracaso Como alternativa se ha propuesto el uso de especies locales (del pool lo-cal externo Figura 1) tras comprobarse en distintos ambientes mediante siembras experimentales que se establecen mejor que las especies comerciales usadas en mezclas estaacutendares (Paschke et al 2000 Prach 2003 Tinsley et al 2006) Desde el punto de vista de la restauracioacuten del capital natural en forma de bienes y servicios el uso de especies locales es altamente recomendable por sus ventajas ecoloacutegicas y geomorfoloacutegicas tales como la preservacioacuten de la integridad geneacutetica la conservacioacuten de la diversidad local la compatibilidad con otras especies locales y el control eficiente de la erosioacuten (Petersen et al 2004 Tinsley et al 2006 Steinfeld et al 2007)

No obstante la teoriacutea sobre los filtros ecoloacutegicos nos advierte que el uso de especies lsquolocalesrsquo (del pool lo-cal externo Figura 1) no siempre garantiza el eacutexito de la revegetacioacuten El experimento de Tormo et al (2006) corrobora esta idea dado que varias de las especies sembradas del pool local no fueron capaces de esta-blecerse en las condiciones limitantes de los taludes (Figura 4) Por ello Bochet et al (2010b) proponen una metodologiacutea de seleccioacuten de especies basada en la idea de que aquellas especies capaces de co-lonizar espontaacuteneamente y de forma abundante los taludes son especies idoacuteneas que estaacuten adaptadas

a las condiciones locales de estos y que presentan por tanto ciertas garantiacuteas de eacutexito para la revege-tacioacuten de estas laderas El proceso de seleccioacuten se divide en dos fases En primer lugar la identificacioacuten mediante inventarios floriacutesticos de las especies que colonizan con eacutexito los taludes y en segundo lugar la validacioacuten del proceso de seleccioacuten mediante siem-bras experimentales a pequentildea escala con las espe-cies identificadas Esta segunda fase es importante tambieacuten para descartar problemas de competencia entre especies seleccionadas para las mezclas (Ma-tesanz y Valladares 2007) Aplicando este meacutetodo a taludes de la comarca de Requena-Utiel Bochet et al (2010b) identificaron entre las especies del pool local externo 41 especies capaces de colonizar espontaacute-neamente y con eacutexito al menos uno de los cuatro tipos de taludes estudiados (terrapleacuten norte terra-pleacuten sur desmonte norte desmonte sur Tabla 3) En la fase de validacioacuten se demostroacute mediante una hidrosiembra en unos terraplenes de la N-330 (Utiel Valencia) un mayor establecimiento de la vegetacioacuten con la mezcla de semillas de especies seleccionadas a partir de esa lista de 41 especies (lsquocolonizadoras con eacutexitorsquo) en comparacioacuten con una mezcla de semillas de especies comerciales utilizada habitualmente en esta regioacuten para la revegetacioacuten de taludes (NTJ 08H 1996) Las densidades de cobertura vegetal fueron de 4 a 15 veces mayores durante al menos los cuatro primeros antildeos para la mezcla de especies locales se-leccionadas con este meacutetodo (Figura 21)

Figura 21 Cobertura vegetal (media plusmn desviacioacuten estaacutendar) proporcionada por las especies sembradas incluidas en la mezcla de especies seleccionadas (SelMix especies colonizadoras espontaacuteneas con eacutexito) y en la mezcla estaacutendar de especies comerciales (ComMix) durante los cuatro primeros antildeos tras una hidrosiembra a pequentildea escala La hidrosiembra se realizoacute en septiembre de 2003 Modificado a partir de Bochet et al 2010b

Evidentemente este meacutetodo garantiza el eacutexito de las especies seleccionadas uacutenicamente para unas condiciones ecoloacutegicas y un tipo de haacutebitat similares a los de las zonas inventariadas No obstante dado que las especies son capaces de superar los filtros gracias a sus caracteriacutesticas funcionales (veacutease apar-tado III4) la identificacioacuten de los rasgos funciona-les asociados al eacutexito de las especies colonizadoras de taludes podriacutea ser uacutetil para la elaboracioacuten de unos criterios teacutecnicos eficaces de seleccioacuten de es-pecies en un amplio rango de condiciones ambien-tales (Cano y Montalvo 2003 Karim y Malik 2008) Por ejemplo Cano y Montalvo (2003) proponen una tipificacioacuten integrada de las plantas de las comu-nidades de desmontes de sustratos graniacuteticos de la provincia de Pontevedra incluyendo una evalua-cioacuten de las aptitudes de los tipos encontrados para el control de la erosioacuten Los resultados de la eva-luacioacuten muestran siete tipos distintos de plantas que se discriminan por sus atributos relacionados con la adecuacioacuten ambiental la proteccioacuten aeacuterea la proteccioacuten subterraacutenea la persistencia y el valor esteacutetico Mediante este sistema de clasificacioacuten se constata que el 96 de las especies colonizadoras de desmontes son poco exigentes en cuanto a nu-trientes y presentan buenas aptitudes protectoras frente a la erosioacuten (alta proteccioacuten superficial y cre-cimiento horizontal raacutepido) Sin embargo el 48 de las especies recomendadas para la restauracioacuten de estos ambientes tienen un valor protector global de bajo a muy bajo bien por no estar adaptadas a las condiciones generales de los taludes bien por no proveer suficiente proteccioacuten superficial Estos resultados y el bajo porcentaje de especies comunes (13) entre las especies colonizadoras espontaacuteneas y las recomendadas sugieren un deficiente conoci-miento de las especies adaptadas una limitada dis-ponibilidad comercial y la existencia de criterios de seleccioacuten inadecuados

4 Utilizacioacuten de las interacciones planta-planta para la restauracioacuten

La utilizacioacuten de las interacciones positivas entre plantas en restauracioacuten tiene potencial para mejorar el eacutexito de los proyectos de restauracioacuten reducien-do a su vez el gasto en mantenimiento de estos

lugares (Padilla y Pugnaire 2006) Maacutes concretamen-te las especies herbaacuteceas promovidas al principio de la restauracioacuten por su raacutepido crecimiento y su potencial para evitar la erosioacuten podriacutean facilitar el establecimiento de especies lentildeosas (Maestre et al 2001) o incluso de otras especies herbaacuteceas dando lugar a incrementos en la diversidad y cobertura de las comunidades del talud Sin embargo el uso de estas especies herbaacuteceas como plantas facilita-doras ya sea de herbaacuteceas o lentildeosas permanece pobremente estudiado en estos medios Las inte-racciones herbaacutecea-herbaacutecea en estos medios son completamente desconocidas y los escasos estu-dios sobre las interacciones herbaacutecea-lentildeosa apun-tan a que la competencia es maacutes importante que la facilitacioacuten en estos medios (Soliveres et al en revisioacuten veacutease Capiacutetulo 67)

5 Clave dicotoacutemica para la toma de decisiones

En la Figura 22 proponemos una herramienta uacutetil en forma de clave dicotoacutemica para ayudar en la toma de decisiones para la restauracioacuten de taludes de ca-rretera Esta clave se basa en una primera propuesta de Matesanz et al (2006) parcialmente completada a partir de varios trabajos presentados en este capiacute-tulo En la clave se identifican cinco criterios princi-pales para la toma de decisiones (el clima el suelo el tipo y la pendiente del talud y la proximidad de zonas de vegetacioacuten natural)

La Figura 22 pone de manifiesto que uno de los mayores retos para el futuro reside ahora en la res-tauracioacuten de los desmontes con pendientes eleva-das (gt27deg y sobre todo gt45deg) en los que la ejecu-cioacuten del extendido de tierra vegetal representa una maniobra arriesgada y peligrosa y la aplicacioacuten de hidrosiembras no tiene eacutexito El eacutexito de la restau-racioacuten de estas laderas pasa por realizar cambios en la macrotopografiacutea reduciendo la inclinacioacuten la morfologiacutea y la longitud de las pendientes o en la microtopografiacutea aumentando la rugosidad del suelo y creando zonas de menor compactacioacuten antes de poder aplicar cualquier medida complementaria de restauracioacuten que facilite el establecimiento de la ve-getacioacuten (veacutease Capiacutetulo 3)

2004 2005 2006 2007

ComMix

Cobe

rtur

a es

peci

es

hidr

osem

brad

as (

)

SelMix

Antildeo

100

80

60

40

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135134

Proc

esos

eco

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cos

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stau

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e la

cub

ierta

vege

tal

IacuteNDICE

Condiciones climaacuteticas

Favorables1 Desfavorables1

Tipo de talud Tipo de talud

Terrapleacuten Desmonte Terrapleacuten Desmonte

Suelo Dist Pend Suelo Dist Pend Suelo Dist

rico2 pobre2 lt27ordm cerca3 lejos3 rico2 pobre2 lt27ordm cerca3 lejos3 gt27ordm gt27ordm lt27ordm

Tierra vegetal + (hidrosiembra)4

(a partir de Valladares et al 2004)

Restauracioacuten pasiva

(a partir de Matesanz et al 2006)

simultaacuteneo simultaacuteneo

Tierra vegetal + hidrosiembra con una seleccioacuten apropiada de especies

(a partir de Bochet et al 2010)

simultaacuteneo

Pend

gt27ordm

DistSueloPend

lejos3 cerca3 pobre2rico2 gt27ordmlt27ordm lejos3cerca3 pobre2 rico2

Cambios topografiacutea yo ecotecnologiacuteas

(veacuteanse Capiacutetulos 2 y 6)

Figura 22 Clave dicotoacutemica para la toma de decisiones en la restauracioacuten de taludes de carretera Los criterios a tener en cuenta aparecen en los recuadros verdes condiciones climaacuteticas tipo de talud aacutengulo de la pendiente (Pend) condiciones del suelo (Suelo) y distancia a la vegetacioacuten natural circundante (Dist) Las liacuteneas punteadas derivan de extrapolaciones indirectas

1 Umbral de condiciones climaacuteticas lsquofavorablesdesfavorablesrsquo las condiciones climaacuteticas son desfavorables a partir del momento en que existe un periodo largo en el que el crecimiento vegetativo no es posible o estaacute fuertemente limitado por la sequiacutea Este punto criacutetico se da cuando hay maacutes de tres meses seguidos de sequiacutea o cuando la precipitacioacuten media anual es inferior o igual a 350 mm (en la Peniacutensula Ibeacuterica condiciones de ombroclima semiaacuterido o aacuterido seguacuten Rivas Martiacutenez 1983)

2 Umbral de suelo lsquoricopobrersquo un suelo es considerado pobre a partir del momento en que los 10 cm de tierra del talud que quedan ex-puestos a soportar la colonizacioacuten vegetal estaacuten compuestos de tierra mineral que nunca ha estado expuesta a meteorizacioacuten previamente (material litoloacutegico puro o tierra proveniente de horizontes de suelo no superficiales) o si existe una limitacioacuten edaacutefica especial (salinidad contaminacioacuten etc)

3 Umbral de distancia del talud a la flora natural lsquocercanalejanarsquo la vegetacioacuten natural se considera cercana en un intervalo de entre 0 m y miacutenimo 150 m desde el talud Estos resultados se basan en el trabajo de Bochet et al (2007a) en el que los autores no encuentran una limi-tacioacuten importante a la colonizacioacuten por falta de propaacutegalos en un intervalo 0 a 150 m desde el talud aunque siacute encuentran una segregacioacuten de las especies de acuerdo con su mecanismo de dispersioacuten vieacutendose favorecidas aquellas especies que se dispersan a larga distancia

4 Valladares et al (2004) consiguen buenos resultados con este tratamiento combinado de tierra vegetal + hidrosiembra No obstante podriacutea ser que el uacutenico tratamiento de extendido de tierra vegetal fuese suficiente (y la hidrosiembra innecesaria) para alcanzar resultados similares

V CONCLUSIONES

En este capiacutetulo se ha puesto de manifiesto la importancia del conocimiento de los principios y teoriacuteas que rigen el desarrollo de las comunidades de ecosistemas degradados en el eacutexito de su res-tauracioacuten

A partir de distintos estudios basados en el meacutetodo cientiacutefico en primer lugar se han identificado los filtros ecoloacutegicos que controlan la colonizacioacuten y la sucesioacuten en los taludes de infraestructuras lineales y en segundo lugar se han propuesto medidas de restauracioacuten eficaces basadas en la manipulacioacuten de estos filtros para distintos escenarios climaacuteticos topograacuteficos edaacuteficos y paisajiacutesticos

Antes de tomar cualquier decisioacuten en un proyecto de restauracioacuten y siempre que sea posible con-viene llevar a cabo un estudio de las variables ambientales que condicionan la zona a restaurar (clima suelo topografiacutea flora proximidad de la vegetacioacuten naturalhellip) Esta prospeccioacuten permitiraacute orientar la eleccioacuten de las medidas maacutes adecuadas y garantizar su viabilidad y rentabilidad en teacutermi-nos de coste beneficio

No obstante no siempre es necesario intervenir ya que en ocasiones la colonizacioacuten natural es suficien-te para proporcionar una cobertura vegetal eficaz en el control de la erosioacuten y la estabilizacioacuten del suelo

Ademaacutes cualquier actuacioacuten que favorezca los pro-cesos espontaacuteneos de colonizacioacuten regeneracioacuten y sucesioacuten daraacute lugar a ecosistemas maacutes sostenibles a largo plazo

Las teacutecnicas convencionales de extendido de tierra vegetal yo hidrosiembra pueden proporcionar resul-tados satisfactorios siempre y cuando se optimice su rendimiento con un manejo apropiado de la tierra vegetal yo con una seleccioacuten adecuada de las espe-cies hidrosembradas

La revegetacioacuten de los desmontes de elevada pen-diente sigue representando un reto importante para el futuro Tambieacuten se hace necesario un mayor cono-cimiento sobre la evolucioacuten de las comunidades de taludes a medio y largo plazo

Finalmente los estudios enfocados a la restauracioacuten de taludes de carretera cobraraacuten realmente sentido cuando esteacuten al alcance de los gestores con el fin de ser aplicados en restauracioacuten de los taludes de infraestructuras lineales

VI PREGUNTAS CLAVE

iquestEsimportanteconocerlosprocesosecoloacutegicosquedeterminanelensamblajedelasespeciesencomunidadesparalarestauracioacutendelostaludesdeinfraestructuraslineales

Siacute Los procesos ecoloacutegicos que determinan el en-samblaje de las especies pueden verse limitados en los taludes por una serie de factores (abioacuteticos bioacuteticos o de disponibilidad de semillas) tambieacuten llamados lsquofiltros ecoloacutegicosrsquo La identificacioacuten de los filtros maacutes limitantes al establecimiento de las plan-tas en estos ambientes es sumamente importante como paso previo a la toma de decisiones para el eacutexito de su restauracioacuten Asimismo la restauracioacuten consiste en la manipulacioacuten conscientemente del o de los filtros maacutes limitantes con el objetivo de acelerar o dirigir el proceso de colonizacioacuten vegetal

iquestLacolonizacioacutenespontaacuteneadelostaludesdeinfraestructuraslinealesporalgunasespecies(ynoporotras)sedebealazar

No La colonizacioacuten de los taludes responde a un proceso de seleccioacuten de las especies locales (de la zona) a traveacutes de los distintos filtros ecoloacutegicos La seleccioacuten de las especies se hace en funcioacuten de sus caracteriacutesticas que reflejan su capacidad para lle-gar germinar establecerse y competir en el talud

iquestCuaacuteleselfactormaacuteslimitanteparaelestablecimientodelasplantasenlostaludesdeinfraestructuraslineales

Las malas condiciones geomorfoloacutegicas edaacuteficas y bioloacutegicas que caracterizan habitualmente a los ta-ludes al teacutermino de la obra suelen ser limitantes en las primeras etapas de la colonizacioacuten de los taludes (germinacioacuten de las semillas y supervivencia de las

plaacutentulas) sobre todo en desmontes y en climas se-cos En las etapas posteriores de la sucesioacuten el filtro bioacutetico (competencia) puede cobrar una mayor impor-tancia al menos en terraplenes y climas huacutemedos

iquestCuaacutendoactuar(restauracioacutenpasivaoactiva)

Las malas condiciones abioacuteticas de los taludes al teacutermino de la obra comprometen en gran medida el eacutexito de una colonizacioacuten raacutepida de estas laderas y por tanto tambieacuten de una restauracioacuten pasiva Solo en condiciones climatoloacutegicas topograacuteficas geoloacute-gicas y edafoloacutegicas muy favorables se podraacute optar por una restauracioacuten pasiva Estas circunstancias se dan en presencia de precipitaciones y temperaturas adecuadas y de laderas de pendiente suave sin aflo-ramientos rocosos y suelos sin carencias nutritivas o problemas fiacutesicos importantes (nutrientes com-pactacioacuten) y proacuteximas a zonas de vegetacioacuten natural (veacutease Figura 22) Sin embargo cuando al menos uno de estos factores sea menos favorable para el establecimiento de la vegetacioacuten se optaraacute por una restauracioacuten activa con una cuidadosa eleccioacuten de las teacutecnicas de restauracioacuten maacutes adecuadas en fun-cioacuten de los filtros maacutes limitantes en cada situacioacuten

iquestCoacutemoactuar

Las medidas de restauracioacuten que se toman deben de estar dirigidas a contrarrestar el efecto del o de los filtros maacutes limitantes al establecimiento de las plantas en cada circunstancia Por ejemplo una es-casa disponibilidad de semillas debida a la ausencia de vegetacioacuten natural en las proximidades de los taludes puede ser suplida bien por la aplicacioacuten de una capa de tierra vegetal en buenas condiciones que incluye el banco de semillas de las especies locales bien por la hidrosiembra de semillas de

137136

Proc

esos

eco

loacutegi

cos

y re

stau

raci

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especies elegidas por su capacidad de adaptacioacuten a las condiciones del medio La aplicacioacuten de tierra vegetal tambieacuten permite contrarrestar las limitacio-nes derivadas de unas malas condiciones edaacuteficas del suelo

iquestCoacutemooptimizarelcontenidodesemillasenlatierravegetal

En el trazado de la obra extraer la capa superficial con una profundidad maacutexima de 10 cm ya que por debajo de esta profundidad el nuacutemero de semillas viables es miacutenimo Esto supone el uso de una ma-quinaria apropiada para garantizar una extraccioacuten

superficial del suelo En la medida de lo posible co-ger la tierra vegetal al final del otontildeo cuando el con-tenido en semillas viables es maacuteximo Tratar de no almacenar la tierra vegetal incorporaacutendola a taludes recieacuten construidos en zonas proacuteximas a la extraccioacuten para maximizar la presencia de ecotipos adaptados a las condiciones climaacuteticas y edaacuteficas locales En caso de que la tierra vegetal sea almacenada hacerlo en montones pequentildeos y poco compactados y si las semillas han germinado esperar a que las plantas produzcan nuevas semillas que se incorporen al sue-lo Extender la tierra vegetal en capas finas (menos de 5 cm) ya que semillas de herbaacuteceas enterradas a maacutes profundidad no seraacuten capaces de emerger

Usodeunasmismasteacutecnicasderestauracioacutenparacualquierescenariogeograacuteficoclimaacuteticooedaacutefico

El uso habitual de rsquorecetasrsquo generales para la res-tauracioacuten de los taludes de infraestructuras lineales se ha traducido en la utilizacioacuten de unas mismas teacutecnicas de restauracioacuten para cualquier escenario geograacutefico climaacutetico o edaacutefico Esto conduce a la aplicacioacuten de teacutecnicas muy caras (pe hidrosiem-bras o esparcido de tierra vegetal) de las que se

podriacutea prescindir en muchas ocasiones bien por-que las condiciones climaacuteticas y edaacuteficas permiten una colonizacioacuten espontaacutenea raacutepida a partir de la vegetacioacuten natural circundante bien porque estaacuten condenadas al fracaso en condiciones extremas como es el caso en los desmontes de elevada pen-diente Por tanto para rentabilizar al maacuteximo la in-versioacuten econoacutemica de los proyectos se debe selec-cionar concienzudamente la o las teacutecnicas de res-tauracioacuten maacutes apropiadas para cada circunstancia

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VII ERRORES HABITUALES

Usodeespecieslsquoautoacutectonasrsquoenlashidrosiembrasindependientementedesucapacidaddeadaptacioacutenalascondicionesdelostaludes

Desde hace unos antildeos se recomienda incluir una proporcioacuten determinada de semillas de especies lsquoautoacutectonasrsquo en las mezclas usadas en las hidro-siembras de taludes de carretera Aunque son especies vinculadas a la zona puesto que per-tenecen al pool externo de especies locales no suelen ser especies adaptadas a las condiciones abioacuteticas de los taludes al menos en las prime-ras fases de la sucesioacuten Suelen ser especies maacutes propias de situaciones estables que aparecen en estadios maacutes avanzados de la sucesioacuten vegetal En este sentido el teacutermino de lsquoespecies autoacutec-tonasrsquo usado extensamente en el contexto de la restauracioacuten de taludes de carretera deberiacutea hacer referencia a aquellas especies autoacutectonas pero asociadas a entornos y condiciones ecoloacutegicas si-milares al de los taludes y no a las formaciones forestales o de maacuteximo nivel de desarrollo carac-teriacutesticas de la regioacuten (veacutease seccioacuten IV3)

Usodeunasmismasmezclasdesemillasenlashidrosiembrasdetaludesdedistintotipoyorientacioacuten

Dado que la intensidad de los factores que limitan el establecimiento de las plantas en los taludes variacutea en funcioacuten del tipo y orientacioacuten de los talu-des (erosioacuten competencia compactacioacuten dispo-nibilidad de aguahellip) y que los filtros seleccionan a las especies en funcioacuten de sus rasgos las mezclas de semillas para las hidrosiembras deberiacutean de

disentildearse tomando en consideracioacuten estas dife-rencias No obstante esta propuesta encarece los costes de la restauracioacuten al mismo tiempo que ralentiza su ejecucioacuten Una solucioacuten alternativa consistiriacutea en elaborar mezclas de semillas que in-cluyan especies capaces de establecerse con eacutexito en todos los tipos y orientaciones de taludes de una misma zona (veacutease el ejemplo de especies en la Tabla 3 para la zona de la Autoviacutea Andash3 a la altura de la Plana de Utiel-Requena en la Comu-nidad Valenciana)

Exclusioacutendelavegetacioacutennaturalcircundanteenelproyectopreviodeconstruccioacutenyenlafasederestauracioacuten

En la mayoriacutea de las ocasiones la existencia de vegetacioacuten natural en los aledantildeos de la obra suele obviarse desde las fases iniciales de construccioacuten de la infraestructura ya que estas zonas no se con-sideran parte de la obra Si a esto le sumamos las dificultades econoacutemicas que conlleva la inclusioacuten de maacutes terreno en el proyecto la realidad es que pocas veces se aprovecha la presencia de manchas de vegetacioacuten natural como agente de restauracioacuten pasivo e incluso se desbrozan para disminuir la probabilidad de incendios ocasionados por el traacute-fico En este capiacutetulo se ha destacado los bene-ficios de determinados tipos de haacutebitat y de su proximidad al talud como fuente de semillas para la colonizacioacuten de los taludes La evaluacioacuten previa de estos indicadores (tipo de haacutebitat y distancia al talud) permitiraacute determinar si interesa incluir las zonas de vegetacioacuten natural cercanas en el proyec-to de restauracioacuten del talud

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Introduccioacuten de especies lentildeosas

Pedro Villar-Salvador Santiago Soliveres y Joseacute Luis Quero

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IacuteNDICE

CAPIacuteTULO 6 Introduccioacuten de especies lentildeosas

Pedro Villar-Salvador Santiago Soliveres y Joseacute Luis Quero

I OBJETIVOS DE LA REVEGETACIOacuteN CON PLANTAS LENtildeOSAS FACTORES LIMITANTES

Las infraestructuras lineales (autopistas carrete-ras caminos viacuteas del tren etc) generan numero-sos impactos ambientales durante su construccioacuten y explotacioacuten (Forman y Alexander 1998 Steinfeld et al 2007) (veacutease Capiacutetulo 1) Por ello uno de los objetivos de las obras de las infraestructuras linea-les debe ser su integracioacuten ambiental y funcional en el territorio que atraviesan La vegetacioacuten tanto la surgida espontaacuteneamente como la introducida acti-vamente desempentildea un papel muy importante en dicho objetivo No obstante la revegetacioacuten activa tambieacuten es importante para conseguir otros objeti-vos relacionados tanto con el mantenimiento de la integridad de la infraestructura como con la seguri-dad y comodidad de sus usuarios Especiacuteficamente los principales objetivos que se persiguen con la revegetacioacuten son (Forman et al 2003)

a Integrar la infraestructura en la dinaacutemica ecoloacutegi-ca del territorio circundante mediante la restaura-cioacuten o rehabilitacioacuten de funciones ecosisteacutemicas como la creacioacuten mejora y proteccioacuten del suelo reduccioacuten de la escorrentiacutea superficial mitigacioacuten de la fragmentacioacuten de las poblaciones de orga-nismos y catalizacioacuten de la sucesioacuten secundaria asiacute como la mejora de la calidad del agua emitida por la infraestructura

b Mantener la integridad de la infraestructura y pro-porcionar una barrera de colisioacuten eficaz y segura en caso de accidentes

c Minimizar el deslumbramiento de los conducto-res apantallar el ruido y los gases contaminantes y reducir el viento lateral

d Eliminar los impactos visuales de las obras y me-jorar la percepcioacuten esteacutetica de la infraestructura

La implantacioacuten de una comunidad de plantas herbaacute-ceas es muy eficaz para algunas de estas funciones como prevenir la erosioacuten (Andreacutes y Jorba 2000) pero no para otras Por ello las plantas lentildeosas deben ser un complemento a las hierbas en los proyectos de revegetacioacuten de infraestructuras lineales Sin em-bargo en ambientes muy secos o cuando los suelos son muy pobres en nutrientes el establecimiento de una cubierta de hierbas es difiacutecil y lento Ello es debido a que las hierbas en general y particularmen-te las que se utilizan en la restauracioacuten de infraes-tructuras lineales demandan una gran cantidad de recursos y son poco tolerantes a factores de estreacutes Ademaacutes en ambientes mediterraacuteneos la hierba se marchita al final de la primavera incrementaacutendose el riesgo de incendio por lo que se hace necesario segarla con el consiguiente incremento del coste de mantenimiento de la obra En estos casos las plantas lentildeosas no tendriacutean por queacute ser solamente un complemento a las plantas herbaacuteceas sino una alternativa La introduccioacuten de plantas lentildeosas per-mite no solamente acelerar la sucesioacuten secundaria garantizando a medio y largo plazo todas las funcio-nes de proteccioacuten frente a la erosioacuten estabilizacioacuten del suelo y drenaje de agua La ventaja de las espe-cies lentildeosas frente a las herbaacuteceas es que producen un sistema radicular mucho maacutes profundo extenso y resistente favoreciendo una mayor consolidacioacuten y estabilidad del suelo si la densidad de planta es

suficientemente elevada Ademaacutes a largo plazo re-duciraacuten el riesgo de incendio porque la mayoriacutea de ellas permanecen verdes durante el verano y permi-ten crear manchas discontinuas de vegetacioacuten embe-bidas en una matriz de suelo desnudo lo que redu-ce la propagacioacuten del fuego en caso de incendio No conviene implantar formaciones mono especiacuteficas ya que ecoloacutegicamente pueden ser menos funciona-les resistentes y resilientes frente a perturbaciones y factores de estreacutes Tampoco es recomendable la eliminacioacuten total de la vegetacioacuten herbaacutecea antes o durante la introduccioacuten de plantas lentildeosas porque seraacute fundamental para prevenir la erosioacuten hasta que se consiga una cobertura adecuada de especies le-ntildeosas que pueda cumplir con dicha funcioacuten A la lar-ga las especies lentildeosas seraacuten las que excluyan a las hierbas A pesar de su importancia y la experiencia proveniente de la restauracioacuten forestal las plantas lentildeosas no reciben la atencioacuten debida en los pro-yectos de restauracioacuten de infraestructuras lineales ni se dedican los recursos suficientes para su man-tenimiento El resultado son taludes con herbazales sempiternos con coberturas de lentildeosas muy pobres en los que se gastan importantes recursos en siegas y herbicidas para prevenir incendios

El objetivo de este capiacutetulo es abordar los princi-pales factores limitantes y las praacutecticas que condi-cionan el establecimiento de las plantas lentildeosas en las obras de infraestructuras viarias Pretendemos hacer eacutenfasis en aquellos aspectos que a nuestro juicio son muy determinantes en la implantacioacuten de las plantas identificar los principales errores y dar una base cientiacutefica a la toma de las decisiones im-portantes

Las principales limitaciones para la implantacioacuten de plantas lentildeosas en infraestructuras lineales y los fac-tores que las determinan se recogen en la Tabla 1 (Steinfeld et al 2007)

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II SELECCIOacuteN DE ESPECIES E IMPORTANCIA DE LA PROCEDENCIA DE LOS MATERIALES DE REPRODUCCIOacuteN

La seleccioacuten de especies lentildeosas destinadas a obras civiles tradicionalmente se ha basado tanto en el potencial colonizador y la resistencia a condiciones

adversas de las especies como en criterios ornamen-tales en detrimento de otros aspectos maacutes impor-tantes desde el punto de vista ecoloacutegico

Tabla 1 Principales factores limitantes para el establecimiento de plantas lentildeosas en obras de infraestructuras lineales

FACTOR LIMITANTE iquestQUEacute CAUSA LA LIMITACIOacuteN

Disponibilidad de agua en el suelo

El reacutegimen de precipitaciones y temperaturas de la zona la orientacioacuten de la ladera y la posicioacuten en ella el viento la profundidad textura y compactacioacuten del suelo la vegetacioacuten preexistente

Disponibilidad de suelo y su estabilidad superficial

La intensidad de la precipitacioacuten la pendiente y longitud de la ladera las heladas la vegetacioacuten preexistente la pedregosidad superficial la falta de tierra vegetal

Fertilidad del suelo y baja actividad de los organismos del suelo

El contenido de materia orgaacutenica textura pH y salinidad del suelo la vegetacioacuten preexistente el tipo de roca madre la posicioacuten en la ladera y la abundancia de organismos edaacuteficos

Bajas temperaturas La altitud latitud y la orientacioacuten de la ladera

Depredacioacuten Altas densidades de herbiacutevoros

Ausencia de propaacutegulos de plantas

Fuentes de propaacutegulos alejados de la infraestructura lineal (Tormo et al 2009) y la llegada de organismos dispersores a la infraestructura lineal No obstante en ciertas infraestructuras lineales fomentar la llegada de ciertos dispersores como las aves puede poner en peligro la seguridad vial y la de las aves

Competencia con plantas especialmente de hierbas

La disponibilidad de agua y nutrientes minerales en el suelo

Los principales criterios que se deben tener en cuen-ta para la seleccioacuten de especies lentildeosas para infraes-tructuras lineales son

a Las especies deben estar adaptadas a las con-diciones ambientales del sitio de revegetacioacuten Ello significa que deben sobrevivir crecer y ser capaces de regenerar sus poblaciones sin ayuda o con una intervencioacuten miacutenima una vez estable-cidas Para ello se deben seleccionar especies na-tivas y dentro de estas emplear semillas o plan-tones de procedencias cercanas o en su defecto

compatibles con la zona a revegetar Este criterio es importante para reducir tanto los costes de es-tablecimiento y mantenimiento de la vegetacioacuten como el riesgo de expansioacuten de especies invaso-ras (Steinfeld et al 2007)

b Entre el abanico de especies posibles elegir aquellas cuyas caracteriacutesticas (pe porte den-sidad de follaje velocidad de crecimiento ca-pacidad de rebrotar produccioacuten de frutos etc) satisfagan mejor los objetivos del proyecto Por ejemplo si se necesita crear una barrera viva en

una mediana de una carretera que evite el des-lumbramiento de los conductores y detenga un vehiacuteculo que se salga de la calzada sin dantildear a sus ocupantes no se podraacuten utilizar ni aacuterboles ni especies de muy bajo porte como un tomillo (Thymus sp) o un espliego (Lavandula latifolia)

c Verificar que las semillas y plantas de las proce-dencias deseadas estaacuten disponibles en el merca-do No todas las especies estaacuten accesibles a cos-tos econoacutemicos razonables debido a la dificultad de su produccioacuten en vivero a gran escala (Vallejo et al 2003)

En relacioacuten con el primer criterio de seleccioacuten los atributos funcionales de las plantas son un aspecto fundamental para seleccionar las especies Englo-ban las caracteriacutesticas morfoloacutegicas y fisioloacutegicas que condicionan el uso del agua y el metabolismo energeacutetico y por tanto la supervivencia y creci-miento de las plantas Por ejemplo las diferencias en la arquitectura hidraacuteulica (Martiacutenez-Vilalta et al 2002) la arquitectura de la copa (Esteso-Martiacutenez et al 2006) la profundidad de las raiacuteces (Padilla y Pugnaire 2007) o las caracteriacutesticas foliares (Poor-ter y Bongers 2006) pueden determinar las diferen-cias de crecimiento y supervivencia de las especies en una contexto ambiental determinado Dentro de las caracteriacutesticas foliares el aacuterea especiacutefica foliar (SLA) que es el cociente entre el aacuterea y el peso seco de la hoja tiene una gran trascendencia fun-cional ya que se relaciona positivamente con la velocidad de crecimiento la tasa de fotosiacutentesis y transpiracioacuten de las plantas y negativamente con la resistencia a la herbivoriacutea (Ruiz Robleto y Villar 2005 Villar et al 2008 Poorter et al 2009) Va-lores bajos de SLA indican hojas maacutes densas yo gruesas Este tipo de hoja tambieacuten suele tener una mayor capacidad de retener agua y una menor ca-pacidad de transpiracioacuten lo que confiere ventajas adaptativas en climas con escasez de agua como los mediterraacuteneos (Cornelissen et al 1996 Antuacutenez et al 2001 Poorter et al 2009) Prueba de ello es que en una plantacioacuten de especies lentildeosas medite-rraacuteneas en los taludes de una carretera del Parque Natural Sierra de Cardentildea y Montoro (Coacuterdoba) se observoacute una relacioacuten negativa entre el aacuterea espe-ciacutefica foliar y la supervivencia (Figura 1) Especies con hojas de bajo SLA como Quercus ilex (enci-na) Pistacia lentiscus (lentisco) u Olea europaea var sylvestris (acebuche) estaacuten mejor adaptadas a soportar la elevada insolacioacuten y temperatura de los taludes durante el verano en contraposicioacuten con Viburnum tinus (durillo) o Quercus faginea (queji-go) que son especies predominantes en umbriacuteas y

por tanto tienen hojas maacutes finas que les permiten captar mayor radiacioacuten pero no para retener agua

En relacioacuten con la arquitectura hidraacuteulica del tallo el agua sube desde las raiacuteces hasta las hojas a traveacutes de los conductos del xilema La ascensioacuten del agua es un transporte pasivo que se realiza aprovechan-do la fuerza de cohesioacuten de las moleacuteculas de agua y es fundamental que la columna de agua que va por el interior de los conductos no se rompa De lo contrario se formariacutea una embolia (esto es aire en el conducto) que impediriacutea el flujo de agua hasta las hojas La embolia de los conductos del xilema es una de la principales causas de muerte en las espe-cies lentildeosas (McDowell et al 2008) En situaciones de sequiacutea estival la falta de agua en el suelo y la mayor transpiracioacuten foliar provocan tensiones en las columnas de agua de los conductos del xilema que pueden llegar a romperlas La mejor manera de me-dir la resistencia del xilema al embolismo es median-te las curvas de vulnerabilidad (Sperry y Saliendra 1994) en las que se determina el potencial hiacutedrico al que el tallo pierde el 50 de su conductividad hidraacuteulica (P

50) Valores muy negativos de P

50 indi-

caraacuten elevada resistencia al embolismo (Martiacutenez-Vilalta et al 2002) En la repoblacioacuten de los taludes del Parque Natural Sierra de Cardentildea y Montoro que se mencionoacute anteriormente se observoacute una relacioacuten positiva entre supervivencia y P

50 de forma que las

especies maacutes resistentes al embolismo presentaron mayor supervivencia que las especies menos resis-tentes (Figura 1)

En este estudio cabe destacar el caso particular de Retama sphaerocarpa (retama) que es una especie con relativamente poca resistencia al embolismo (P

50= -3 MPa) pero con una gran supervivencia Esto

indica que aunque la arquitectura hidraacuteulica es muy importante para el funcionamiento de las plantas no puede predecir perfectamente el potencial de su-pervivencia de una especie dado que en un mismo sistema la adaptacioacuten de las plantas puede basarse en otras estrategias en las que otros atributos fun-cionales tambieacuten pueden ser importantes (Miranda et al 2010) De ahiacute que recomendemos que la seleccioacuten de especies base en una combinacioacuten de varias ca-racteriacutesticas funcionales En el caso de la retama su alta supervivencia estaacute relacionada con la formacioacuten de profundas raiacuteces (Padilla y Pugnaire 2007) y con la falta de hojas que permite reducir la transpiracioacuten concentrando la fotosiacutentesis en los tallos los cuales ademaacutes tienen valores bajos de SLA (Figura 1)

En conclusioacuten los rasgos funcionales pueden indicar la supervivencia potencial de las especies y por ende

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es un buen criterio para su seleccioacuten en trabajos de restauracioacuten Por ejemplo el durillo con un alto SLA hojas grandes y baja resistencia al embolismo difiacute-cilmente soportaraacute las condiciones de sequiacutea y fuer-te radiacioacuten durante el verano Para la seleccioacuten de especies no es necesario cuantificar SLA o P

50 En la

literatura cientiacutefica existe cada vez maacutes informacioacuten sobre rasgos funcionales asociados a la supervivencia como los presentados aquiacute Consultando los valores por especie de estos rasgos en la literatura cientiacutefica es posible establecer el potencial de supervivencia de las especies en condiciones adversas

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60

40

20

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Supe

rviv

enci

a (

)

0 2 4 6 8 10 12 14SLA (m2 kg-1)

Retama sphaerocarpa Quercus ilex

Quercus coccifera

Quercus faginea

Olea europea

Pistacia lentiscus

Rhamnus lycinoides

Viburnum tinus

r = -669 P lsaquo 005

Crataegus monoyna

100

80

60

40

20

0

Supe

rviv

enci

a (

)

0 2 4 6 8 10

P50 (-MPa)

Retamasphaerocarpa

Quercus ilex

Quercus faginea

Olea europea

Pistacia lentiscus

Viburnum tinus

r = 070 P lsaquo 01

Quercus coccifera

Figura 1 Relacioacuten entre la supervivencia y el aacuterea especiacutefica foliar (SLA) (panel superior) y el potencial hiacutedrico en el que los tallos pierden el 50 de su conductividad hidraacuteulica (P

50) (panel inferior) entre diferentes especies lentildeosas mediterraacuteneas Los nombres comunes de las

especies son retama (Retama sphaerocarpa) encina (Quercus ilex) quejigo (Q faginea) coscoja (Q coccifera) acebuche (Olea europaea var sylvestris) lentisco (Pistacia lentiscus) taraje (Tamarix sp) y durillo (Viburnum tinus) El punto blanco correspondiente a retama no se incluyoacute en el anaacutelisis de correlacioacuten (veacutease texto para maacutes detalles)

Una vez seleccionadas las especies de plantas es importante que para cada una se elija correctamente el origen o procedencia de los materiales de repro-duccioacuten (MR) Los MR son las plantas o sus partes y las semillas que se usaraacuten en el proyecto de re-vegetacioacuten Muchas especies presentan variaciones funcionales entre poblaciones dando lugar a ecoti-pos que tienen diferentes capacidades de respues-ta a los factores abioacuteticos y bioacuteticos (Abrams 1994 Tognetti et al 1997) Por ejemplo los individuos de las poblaciones maacutes huacutemedas de Quercus suber (al-cornoque) presentan mayor mortandad al ser plan-tados en zonas secas que los individuos proceden-tes de poblaciones que experimentan mayor sequiacutea en su lugar de origen (Ramiacuterez-Valiente et al 2009) Igualmente el dantildeo ocasionado por Matsucoccus josephii una cochinilla endeacutemica del Mediterraacuteneo oriental es mayor en las procedencias de Pinus ha-lepensis (pino carrasco) del Mediterraacuteneo occidental que en las orientales (Mendel 1984) Aunque las es-pecies hayan sido bien seleccionadas un proyecto de revegetacioacuten puede resultar un fracaso si se uti-lizan procedencias no adaptadas a las condiciones ambientales locales Como recomendacioacuten geneacuterica lo ideal es usar MR de localidades proacuteximas a la obra pero a menudo no hay disponibilidad de dicho MR En estos casos se puede emplear MR de locali-dades cuyas condiciones ambientales sean similares con la zona de revegetacioacuten

La mayor parte de los paiacuteses con sectores foresta-les importantes han desarrollado una legislacioacuten y

mecanismos administrativos para regular y contro-lar el uso de los materiales de reproduccioacuten entre regiones Asiacute los paiacuteses de la Unioacuten Europea han definido regiones de procedencia para multitud de especies arboacutereas y arbustivas (Aliacutea et al 2005) Dicha normativa solo es aplicable a trabajos silviacute-colas por lo que si se realiza una interpretacioacuten restrictiva las obras de infraestructuras lineales no estariacutean sometidas a dicha legislacioacuten Sin embar-go muchas obras atraviesan zonas de vegetacioacuten natural por lo que el uso de MR de procedencias incompatibles con la zona de actuacioacuten no es acep-table porque podriacutea contaminar geneacuteticamente las poblaciones naturales y propiciar la peacuterdida de adaptaciones locales Si se desea integrar la infra-estructura en la dinaacutemica ecoloacutegica del territorio y garantizar el eacutexito del proyecto de revegetacioacuten a largo plazo es esencial emplear procedencias com-patibles con la zona donde se ha llevado a cabo la obra Por ello seriacutea deseable que se exija en los pliegos de condiciones de la obra el control del origen y la calidad de los MR Por ejemplo algunos aspectos baacutesicos que hay que considerar es evitar el uso de procedencias litorales en obras en zonas de clima continental y en las especies indiferen-tes a la naturaleza quiacutemica del suelo evitar usar procedencias de suelos baacutesicos en zonas siliacuteceas y viceversa Los criterios esenciales de uso de los materiales de reproduccioacuten y las regiones de proce-dencia reconocida por la legislacioacuten espantildeola para materiales forestales de reproduccioacuten se pueden consultar en Aliacutea et al (2005)

III MEacuteTODOS Y EacutePOCAS DE REVEGETACIOacuteN

1 Meacutetodos de revegetacioacuten

La revegetacioacuten con plantas lentildeosas puede reali-zarse mediante la plantacioacuten de plantas cultivadas en vivero introduccioacuten de fragmentos de plantas (raiacuteces rizomas y tallos) o mediante la siembra de semillas La introduccioacuten de fragmentos vegetativos de plantas lentildeosas es menos habitual que los otros meacutetodos Se emplea para ciertas especies cuando no es posible producir plantas en vivero yo la dis-ponibilidad y capacidad de germinacioacuten de las se-millas es muy reducida restringieacutendose su uso a ciertos trabajos de ecoingenieriacutea como la creacioacuten de fajinas lechos de ramajes y empalizadas vivas (Schiechtl 1986 Steinfeld et al 2007 veacutease el Capiacute-tulo 6 de este libro) Un requisito esencial para em-plear material vegetativo es que enraiacutece faacutecilmente

y que la humedad en el suelo sea elevada durante periacuteodos de tiempo prolongados Asiacute las estaqui-llas de algunas especies arboacutereas y arbustivas de los bosques de ribera como Populus nigra (chopo) P alba (aacutelamo) Tamarix spp (tarajes) y algunas es-pecies de Salix spp (sauces) enraiacutezan faacutecilmente en el campo Sin embargo requieren suelos muy huacutemedos durante todo el antildeo por lo que su em-pleo en proyectos de revegetacioacuten se restringe a obras que se ejecuten en situaciones con elevada disponibilidad de agua como aquellas en zonas de clima atlaacutentico o en obras proacuteximas a las riberas de los riacuteos (Domiacutenguez et al 2004) Tambieacuten pueden implantarse por estaquillas Olea europaea (olivo) y algunos pequentildeos arbustos de la familia de las Labiatae como Lavandula spp (lavandas o esplie-gos) Rosmarinus officinalis (romero) y Thymus spp

Tamarix sp

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En esta laacutemina se muestran las 10 especies citadas en las dos graacuteficas de la figura 1 en la parte su-perior izquierda majuelo (Crataegus monogyna) y taraje de flor pequentildea (Tamarix parviflora) en la parte superior derecha coscoja (Quercus coccifera) encina (Quercus ilex) y quejigo (Quercus faginea) En la imagen inferior y de izquierda a derecha ace-buche (Olea europaea var sylvestris) lentisco (Pis-tacea lentiscus) espino negro (Rhamnus lycioides) retama (Retama sphaerocarpa) y durillo (Viburnum tinus) Autor Ignacio Mola

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(tomillos) El empleo de material vegetativo directa-mente en el campo suele presentar menor supervi-vencia que el uso de plantas previamente cultivadas en viveros especialmente cuanto maacutes seco sea el ambiente de revegetacioacuten En comparacioacuten con las siembras directas y las plantas producidas en vivero a partir de semillas la revegetacioacuten con material vegetativo puede reducir la variabilidad geneacutetica de la poblacioacuten introducida Por ello es importante re-colectar el material vegetativo de una gran variedad de individuos madre (se aconsejan unos 50) y mez-clarla en la obra Ademaacutes en el caso de especies dioicas (con los sexos separados en distintos indivi-duos como el acebo (Ilex aquifolium) o los enebros y sabinas (Juniperus sp) es importante mantener la proporcioacuten de sexos (Steinfeld et al 2007)

Las siembras tienen sus ventajas e inconvenientes con respecto a las plantaciones (Tabla 2) Las siem-bras pueden ser puntuales en el espacio o realizar-se en toda la superficie (siembras a hecho) En las siembras a hecho las semillas se aplican a voleo tanto manualmente como con sembradoras acopla-das a vehiacuteculos diversos y se usa para especies de semillas medianas a pequentildeas Si se conocen a priori

las zonas favorables para la supervivencia (pe lsquosi-tios segurosrsquo sensu Harper et al 1961) las siem-bras puntuales suelen optimizar los esfuerzos en la restauracioacuten focalizando las siembras soacutelo en esas zonas Las siembras puntuales suelen realizarse con especies de semillas grandes como es el caso de las querciacuteneas siendo fundamental proteger la semilla de los depredadores (veacutease apartado VII) Indepen-dientemente del meacutetodo de siembra la emergencia de las plaacutentulas aumentaraacute enormemente si las semi-llas se cubren con tierra o alguacuten tipo de mulch Sin embargo es importante que las semillas no queden muy enterradas aconsejaacutendose que la profundidad a la que quede la semilla no exceda 15-2 veces su longitud (Pentildeuelas et al 2002 Steinfeld et al 2007)

La plantacioacuten de plantas cultivadas previamente en vivero tiene la ventaja de que son menos sensibles a factores de estreacutes abioacuteticos y a la depredacioacuten que las siembras En la plantacioacuten los plantones deben introducirse verticales la tierra debe quedar bien compactada alrededor del cepelloacuten sin que existan bolsas de aire que puedan desecar las raiacuteces asiacute como el nivel de la tierra debe quedar justo por debajo de las primeras hojas

Tabla 2 Ventajas y desventajas de las siembras con respecto de la plantacioacuten

VENTAJAS

Son maacutes baratas si se dispone de abundantes semillas de faacutecil germinacioacuten No obstante las siembras pueden encarecerse notablemente cuando se protegen de los depredadores con protectores individuales (veacutease apartado VII)

Son faacuteciles de ejecutar al no precisarse mano de obra cualificada

Las plantas obtenidas no presentan deformaciones radicales y ello puede favorecer el desarrollo lateral y en profundidad de las raiacuteces asiacute como su conductividad hidraacuteulica (Pemaacuten et al 2006)

DESVENTAJAS

Las semillas y plaacutentulas recieacuten emergidas presentan elevada depredacioacuten y mortandad respectivamente (Matiacuteas et al 2009 Goacutemez-Aparicio et al 2004) por lo que los resultados finales y el eacutexito de la revegetacioacuten son menos predecibles que con la plantacioacuten de plantas de varios meses de edad

No se puede utilizar para especies con baja capacidad germinativa o cuya germinacioacuten no sea coetaacutenea o que se retrasa mucho en el tiempo Esto restringe el uso de la siembra a aquellas plantas lentildeosas que producen gran cantidad de semillas baratas y faacuteciles de germinar

No es aconsejable utilizar la siembra de plantas lentildeosas en zonas con elevado estreacutes ambiental y gran cantidad de depredadores de semillas

Si la siembra es un eacutexito y el porcentaje de planta emergida es elevado se precisan aplicar aclareos para llegar a una densidad adecuada Con la plantacioacuten se controla mejor la densidad final

2 Eacutepocas del antildeo para la revegetacioacuten

Tanto la plantacioacuten como la siembra solamente se deben acometer durante determinados periacuteodos del antildeo en los que se garantice el enraizamiento de las plantas o la germinacioacuten de las semillas El calendario de revegetacioacuten por tanto lo deben determinar los ritmos bioloacutegicos de las plantas y no el calendario de la obra civil Los periacuteodos adecuados para realizar las siembras o plantaciones deben decidirse teniendo en cuenta los periacuteodos de estreacutes que limitan el desarro-llo de las plaacutentulas en la zona de trabajo Como regla general nunca debe revegetarse durante los periacuteodos en los que las plantas estaraacuten limitadas por escasez de precipitacioacuten y bajas temperaturas (Figura 2) Nun-ca se debe realizar una plantacioacuten si el suelo estaacute seco En la mayoriacutea de las zonas de clima mediterraacute-neo el verano es el periacuteodo de mayor estreacutes para las plantas En zonas con bajas temperaturas invernales el invierno tambieacuten es otro periacuteodo muy limitante

La base ecofisioloacutegica de la toma de decisioacuten sobre la fecha de revegetacioacuten se fundamenta en que la capacidad de las plantas joacutevenes para sobrevivir a la aridez estival depende en buena medida del de-sarrollo de un extenso y profundo sistema radical al comienzo del verano (Padilla y Pugnaire 2007 Cuesta et al 2010a) Ello depende de la velocidad de creci-miento de las raiacuteces de cada especie pero tambieacuten del momento en que se produce la revegetacioacuten Si se realiza muy proacutexima al verano y el verano es seco las plantas no tendraacuten tiempo suficiente para expandir su

sistema radical y sufriraacuten un fuerte estreacutes hiacutedrico Por otro lado plantar cuando el suelo estaacute muy friacuteo no es uacutetil ya que las raiacuteces de la mayoriacutea de las plantas lentildeosas no crecen cuando la temperatura del suelo permanece por debajo de los 5-10 degC (Corchero de la Torre et al 2002 Aacutelvarez-Uriacutea y Koumlrner 2007) En zonas de clima mediterraacuteneo el crecimiento de las raiacuteces es elevado en la primera mitad del otontildeo y en primavera y en los sitios de clima atlaacutentico el verano tambieacuten puede ser un periacuteodo de raacutepido crecimien-to siempre que el suelo se mantenga huacutemedo (Lyr y Hoffmann 1967 Corchero de la Torre et al 2002)

En la mayoriacutea de las zonas mediterraacuteneas el periacuteodo huacutemedo del antildeo comprende desde mediados de octu-bre a finales de abril En zonas de clima mediterraacuteneo e inviernos suaves se aconseja que la revegetacioacuten se haga pronto durante el periacuteodo huacutemedo del antildeo En los lugares en los que el invierno es muy friacuteo la revegetacioacuten debe retrasarse hasta el final del invier-no o a comienzos de la primavera (Figura 2) por-que las heladas pueden matar las plaacutentulas emergidas en otontildeo en el caso de las siembras (Pentildeuelas et al 2002) y descalzar y secar las plantas en el caso de las plantaciones En este contexto otra alternativa es adelantar la plantacioacuten y realizarse muy pronto en el otontildeo pero para ello es fundamental que las precipi-taciones otontildeales hayan comenzado En ambientes de clima atlaacutentico donde los veranos no sean muy secos las plantaciones se pueden realizar hasta el final de la primavera y comenzarse muy pronto en el otontildeo e incluso al final del verano

Figura 2 Esquema de los periacuteodos idoacuteneos de revegetacioacuten con plantas lentildeosas en zonas de clima mediterraacuteneo y atlaacutentico (columnas izquierda y derecha respectivamente) tanto de inviernos suaves como de inviernos friacuteos respectivamente (filas superior e inferior respec-tivamente) La altura de la barra simboliza la idoneidad de la fecha de revegetacioacuten Dentro de cada mes se han diferenciado la primera y segunda quincena

Clima mediterraacuteneo

Muyidoacuteneo

Nadaidoacuteneo

Muyidoacuteneo

Nadaidoacuteneo

Inviernossuaves

Inviernosfrios

Clima atlaacutentico

Muy idoacuteneo

Nada idoacuteneo

Muy idoacuteneo

Nada idoacuteneo

Clima mediterraacuteneo Clima atlaacutentico

Inviernos suaves

Inviernos friacuteos

Enero Feb Marzo Abril Mayo Junio Julio Agos Sept Oct Nov Dic Enero Feb Marzo Abril Mayo Junio Julio Agos Sept Oct Nov Dic

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Un aspecto muy importante para decidir la eacutepoca de plantacioacuten en climas de inviernos suaves es el haacutebito foliar de las especies (caducifolias frente a perennifolias) La plantacioacuten de caducifolias de in-vierno a partir de la segunda mitad del otontildeo y du-rante el invierno no propicia la formacioacuten de raiacuteces durante este periacuteodo ya que el crecimiento principal de sus raiacuteces no se produce hasta la formacioacuten de follaje en la brotacioacuten primaveral (Lyr y Hoffmann 1967 Sardaacute et al 2005) Por tanto para las especies caducifolias las plantaciones deben retrasarse has-ta unas semanas antes de la brotacioacuten En cambio las especies perennifolias siacute pueden producir raiacuteces durante el invierno siempre que la temperatura del

suelo se mantenga por encima de los 5-10 degC (Lyr y Hoffmann 1967 Riedacker 1976 Corchero de la Torre et al 2002) ya que en las especies perennifolias la formacioacuten de las raiacuteces depende en buena medida de la fotosiacutentesis del momento (van den Driessche 1991b Maillard et al 2004) En los casos en los que la obra combine tanto especies caducifolias y peren-nifolias se recomienda que se retrase la plantacioacuten hacia el final del periacuteodo friacuteo y se planten a la vez los dos tipos de plantas para reducir los costes de plantacioacuten Por ejemplo en muchas zonas de clima mediterraacuteneo continental este momento puede ser entre la segunda quincena de febrero y la primera quincena de marzo

IV CALIDAD MORFOLOacuteGICA Y FISIOLOacuteGICA DE LAS PLANTAS

Se considera que una planta es de calidad cuan-do es capaz de sobrevivir y crecer adecuadamente en un medio determinado y por tanto cumplir los objetivos establecidos en un plan de revegetacioacuten (Ritchie 1984 Villar-Salvador 2003 Cortina et al 2006) La supervivencia y crecimiento de las plantas utilizadas en los proyectos de revegetacioacuten estaacuten li-gados a su balance de carbono agua y nutrientes minerales Dicho balance depende en uacuteltima instan-cia de los atributos morfoloacutegicos y fisioloacutegicos de las plantas (Gaudet y Keddy 1988 Burdett 1990) A escala intraespeciacutefica las plantas pueden mostrar grandes diferencias en sus atributos funcionales de-pendiendo de la plasticidad fenotiacutepica de la especie la procedencia de la semilla y las condiciones am-bientales durante el cultivo en vivero y el transporte al lugar de plantacioacuten (Coutts 1982 Balaguer et al 2001 Vilagrosa et al 2003 Mena-Petite et al 2004 Villar-Salvador et al 2004 Villar-Salvador et al 2008 Cuesta et al 2010a) No existe un uacutenico modelo de calidad de planta ideal para cada especie Una plan-ta con determinadas caracteriacutesticas funcionales pue-de ser vaacutelida para ciertos objetivos de revegetacioacuten pero no para otros Por tanto de forma ideal las caracteriacutesticas funcionales de las plantas deberiacutean diferir en funcioacuten de las caracteriacutesticas ambientales del lugar de plantacioacuten (Rose et al 1990) La calidad de las plantas cambia en el tiempo variando con su estado fenoloacutegico y su desarrollo ontogeneacutetico

Por ejemplo la resistencia a las heladas en muchas plantas del mundo templado se incrementa a lo lar-go del otontildeo e invierno y se reduce en primavera en respuesta a las horas de luz y la temperatura ambiental (Grossnickle 1992) La calidad de la planta tambieacuten puede cambiar con su edad Nicolaacutes et al (2004) observaron que los plantones de dos savias de Quercus faginea (quejigo) mostraron menor ca-pacidad de producir nuevas raiacuteces supervivencia y crecimiento que los de una savia

La importancia de la calidad de la planta en el eacutexito de un proyecto de revegetacioacuten se incrementa con el grado de estreacutes ambiental en el lugar de la plantacioacuten (del Campo et al 2007 Cuesta et al 2010a) si bien en situaciones de fuerte estreacutes ambiental otros aspectos del proyecto de revegetacioacuten como la preparacioacuten del suelo y los cuidados posplantacioacuten pueden tener un papel maacutes relevante que la calidad de la planta (Navarro et al 2006a) Finalmente las consecuencias del empleo de planta de baja calidad suelen ser muy aparentes a corto plazo Pero a veces las consecuen-cias son solo aparentes muchos antildeos maacutes tarde tal como sucede con las deformaciones radicales causa-das por algunos tipos de contenedores que reducen la estabilidad estructural de los aacuterboles a largo plazo (Lindstroumlm y Rune 1999) En la Tabla 3 se recogen algunas recomendaciones baacutesicas para garantizar un miacutenimo de calidad en las plantas

Tabla 3 Recomendaciones baacutesicas para garantizar un miacutenimo de calidad de planta en los trabajos de revegetacioacuten con plantas lentildeosas

Utilizar preferentemente plantas cultivadas en contenedor que plantas cultivadas a raiacutez desnuda en plantaciones de zonas secas o muy friacuteas Las plantas cultivadas en contenedor casi siempre tienen mayor supervivencia que las cultivadas a raiacutez desnuda (South et al 2005) especialmente en especies perennifolias

Evitar plantas con raiacuteces severamente deformadas (Figura 3) especialmente en aacuterboles porque pueden comprometer la estabilidad estructural a largo plazo En este sentido no usar plantas cultivadas en contenedores que carezcan de sistemas antiespiralizantes como las macetas troncocoacutenicas empleadas en el cultivo de especies ornamentales Esta exigencia probablemente sea menos importante para arbustos de pequentildeo porte

Usar plantas cultivadas en contenedores de al menos 250 ml para plantaciones de zonas secas La supervivencia y crecimiento de las plantas estaacuten directamente relacionados con el volumen del contenedor (South et al 2005 Tsakaldimi et al 2005 Domiacutenguez-Lerena et al 2006) En zonas huacutemedas se pueden usar contenedores maacutes pequentildeos pero la duracioacuten del cultivo (edad de la planta) deberaacute ser menor especialmente en especies de raacutepido crecimiento

No usar plantas cuyos cepellones no esteacuten consolidados es decir que el conglomerado de sustrato retenido por las raiacuteces no se desmorone cuando las plantas se extraigan de las bandejas o durante la manipulacioacuten en la plantacioacuten

Rechazar plantas con podredumbres o plagas y en el caso particular de las especies perennifolias evitar plantas con follaje cloroacutetico y senescente Puede indicar que las plantas esteacuten enfermas o tengan graves deficiencias nutricionales En caso de enfermedades estas pueden propagarse al resto de plantas del proyecto y a las poblaciones naturales circundantes

Desechar las plantas con heridas recientes en los tallos especialmente en el cuello de la raiacutez

No emplear cultivos que tengan dos o maacutes individuos por contenedor En el campo competiraacuten entre siacute y tendraacuten menor vigor

Evitar plantas cuya parte aeacuterea esteacute en crecimiento en el momento de la plantacioacuten Tienen una escasa resistencia a factores de estreacutes ya que las plantas en crecimiento relajan sus mecanismos de resistencia a factores de estreacutes

No llevar al campo plantas que han sido cultivadas en un invernadero sin que se hayan previamente aclimatado (endurecido) al menos un mes al aire libre y a ser posible expuestas a pleno sol

Evitar plantas que muestren un excesivo desequilibrio entre el tamantildeo de su parte aeacuterea y radical En general no son recomendables tanto partes aeacutereas mucho maacutes grandes que las raiacuteces como lo contrario A modo orientativo un pino carrasco (P halepensis) o una encina (Q ilex) cuya altura sea de una a dos veces la altura del contenedor puede ser considerado normal Valores maacutes altos o inferiores no son recomendables Una revisioacuten de la importancia del tamantildeo de las plantas en su establecimiento en campo puede encontrarse en Navarro et al (2006b) En general dentro de los rangos de altura mencionados las plantas de mayor tamantildeo normalmente tienen mayor supervivencia y crecimiento en campo que las maacutes pequentildeas (Villar-Salvador et al 2004 Villar-Salvador et al 2008 Cuesta et al 2010a) (Figura 3)

Evitar plantas cuyos cepellones esteacuten secos al salir del vivero o al llegar a la obra asiacute como plantas con gran cantidad de hierbas en los alveacuteolos

Evitar el uso de plantas cultivadas en viveros emplazados en localidades de inviernos suaves para proyectos de revegetacioacuten en localidades friacuteas aunque la procedencia del material de reproduccioacuten sea adecuada (Mollaacute et al 2006) Si no queda maacutes remedio que utilizar este tipo de planta una solucioacuten es adelantar las plantaciones a mitad del otontildeo para que la planta se aclimate al friacuteo en el campo

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La calidad de una planta puede alterarse al ser llevada al lugar de plantacioacuten El trato rudo de las plantas por los operarios o su desecacioacuten causada por un prolongado e inadecuado almacenamiento y transporte asiacute como una incorrecta plantacioacuten son algunos de los factores que pueden mermar el vigor de la planta de mejor calidad y arruinar

el proyecto de revegetacioacuten maacutes esmerado (Mc-Kay 1997 Vallas-Cuesta et al 1999 Landis et al 2010) Por ejemplo los plantones de P halepensis reducen fuertemente su supervivencia y crecimien-to cuando alcanzan un potencial hiacutedrico al alba inferior a -2 MPa antes de su plantacioacuten (Vallas-Cuesta et al 1999)

A B

C

Figura 3 (A) Detalle de dos plantones de una savia de pino carrasco de tamantildeo de la parte aeacuterea y proporcioacuten de parte aeacuterea con respecto a la parte radical muy distinta La planta grande presentoacute mayor supervivencia y crecimiento plantado con alta densidad de hierba que la planta pequentildea (B) Plantones de Quercus faginea cultivados con crecientes niveles de fertilizante Los dos plantones pequentildeos de la izquierda fueron cultivados con nada o muy poco fertilizante mostrando menor supervivencia y crecimiento en campo que los otros tres plantones grandes que recibieron mayor fertilizacioacuten durante su cultivo (C) Detalle de una raiacutez revirada de Pistacia terebinthus por un mal manejo del cultivo (Fotos Pedro Villar)

La desecacioacuten de las plantas durante el transporte y almacenamiento de la planta afecta menos a las plantas en contenedor que a las de raiacutez desnuda ya que el agua almacenada en los cepellones retrasa su desecacioacuten (Mena-Petite et al 2004) Por esta razoacuten es fundamental que los cepellones de las plantas en contenedor esteacuten bien hidratados al salir del vivero y en el momento de la plantacioacuten aunque ello su-ponga un incremento de los costes de transporte Finalmente las plantas almacenadas en la obra de-beraacuten mantenerse regadas si no van a ser plantadas inmediatamente

Las plantas se deben transportar al lugar de trabajo sin que se recalienten y desequen Por ello no de-ben exponerse al viento ni al sol Las plantas a raiacutez desnuda deben transportarse envueltas en bolsas de papel o alguacuten material semipermeable o en cajas de cartoacuten Lo ideal es que se transporten refrige-radas Si las plantas a raiacutez desnuda no van a ser usadas inmediatamente al llegar a la obra deberaacuten ser aviveradas o guardadas en una caacutemara refrige-rada (Landis et al 2010) En el caso de las plantas en contenedor deberaacuten permanecer almacenadas en lugares frescos y sombreados (pero no a oscuras) hasta su uso debieacutendose programar bien los traba-jos de plantacioacuten para minimizar el periacuteodo de alma-cenamiento y evitar asiacute la desecacioacuten de la planta

Muchas plantas desarrollan interacciones mutualistas con los microorganismos del suelo Las simbiosis con hongos (micorrizas) son de las maacutes importantes y fa-cilitan a la planta la toma de nutrientes minerales y agua lo que es importante para superar las eacutepocas de sequiacutea y vivir en suelos pobres A cambio las mico-rrizas reciben carbohidratos formados por las plantas (Moora y Zobel 2010) Las poblaciones de microorga-nismos del suelo son muy reducidas en lugares muy

degradados o en las obras que han usado materiales esteacuteriles para la construccioacuten de terraplenes y don-de no existe tierra vegetal Ello unido a la pobreza de nutrientes del suelo y las condiciones de elevado estreacutes hiacutedrico dificulta auacuten maacutes la colonizacioacuten de las plantas lentildeosas especialmente las de etapas in-termedias y tardiacuteas de la sucesioacuten Por tanto puede ser recomendable la introduccioacuten de estos microor-ganismos ya sea mezclando esporas con la siembra o mediante la plantacioacuten de individuos previamente micorrizados en el vivero Esta uacuteltima opcioacuten es maacutes recomendable por ser maacutes barata a la vez que actuacutea como fuente de esporas para toda la zona (Moora y Zobel 2010) No obstante la mayoriacutea de las plantas cultivadas en viveros se micorrizan solas durante su cultivo con micorrizas tiacutepicas de vivero o incluso de hongos maacutes frecuentes en ambientes forestales si los viveros se localizan en la proximidad de masas fo-restales Las micorrizas y otras simbiosis con otros microorganismos pueden aumentar el crecimiento y la supervivencia de los individuos introducidos (Titus y del Moral 1998 Requena et al 2001 Thrall et al 2005 Domiacutenguez et al 2006) a la vez que facilitan la formacioacuten de redes de micelios que ayudan a fijar el suelo y la colonizacioacuten de las raiacuteces de otras especies (Dodd 2000) Ademaacutes confieren ventajas a especies normalmente maacutes tardiacuteas en la sucesioacuten (pe lentildeo-sas o herbaacuteceas perennes de vida larga) frente a es-pecies pioneras como las hierbas anuales Por ejem-plo Salsola kali una planta anual problemaacutetica en los taludes de las carreteras porque la mata seca pone en peligro a los conductores al rodar sobre la calzada se mostroacute maacutes competitiva que las especies herbaacuteceas perennes cuando estas no se hallaban micorrizadas Sin embargo la inoculacioacuten con micorrizas hizo que las plantas perennes fueran maacutes competitivas que S kali reduciendo notablemente su presencia en la co-munidad (Allen y Allen 1984)

V DISTRIBUCIOacuteN ESPACIAL DE LAS PLANTAS

Los factores ambientales importantes para la vida de los organismos pueden variar en el espacio a escalas muy diversas desde variaciones a escala regional hasta variaciones muy pequentildeas de apenas unos centiacutemetros (Lechowizc y Bell 1991) Estas variaciones deben ser tenidas en cuenta a la hora de distribuir en el espacio las plantas Por ejemplo la orientacioacuten de los taludes o la posicioacuten dentro del talud conlleva cambios en la disponibilidad de recursos y condicio-nes ambientales que deben ser consideradas para decidir la localizacioacuten de las diferentes especies la

densidad y la distribucioacuten de los individuos Muy frecuentemente se organizan los individuos seguacuten distribuciones regulares (pe cuadrangular rectan-gular tresbolillo lineal) Sin embargo dichas dis-tribuciones limitan la posibilidad de incorporar la variacioacuten espacial en los factores ambientales que ocurre a escalas pequentildeas (Beckage y Clark 2003) La revegetacioacuten basada en la introduccioacuten de planto-nes irregularmente espaciados o formando manchas que imiten la distribucioacuten de la vegetacioacuten natural puede favorecer el desarrollo de lsquoislas de recursosrsquo

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Talud de terrapleacuten de 30 antildeos de antiguumledad de una carretera comarcal de la provincia de Maacutelaga En la parte superior de la fotografiacutea se puede apreciar la presencia de distintas especies de lentildeosas del geacutene-ro Ulex (Foto Pablo Garciacutea-Palacios)

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mejorar el banco de semillas y facilitar el recluta-miento de nuevas plantas acelerando la dinaacutemica sucesional (Maestre 2003) Ademaacutes conocer a priori la distribucioacuten espacial de los factores ambientales puede ayudar a seleccionar los mejores lugares de plantacioacuten y maximizar la supervivencia (pe lsquore-cruitment hotspotsrsquo sensu Hampe et al 2008) Tam-bieacuten se pueden crear manchas de un alto conteni-do en recursos mediante fertilizacioacuten localizada en puntos concretos o bien mediante la construccioacuten de microcuencas u otras estructuras de retencioacuten de agua (veacutease Capiacutetulo 6) De este modo las tareas de revegetacioacuten podriacutean centrarse en estas manchas optimizando asiacute los recursos y evitando plantar o sembrar en zonas donde la probabilidad de marras se incrementa Por ejemplo en un estudio espacial a pequentildea escala de las propiedades edaacuteficas Maes-tre et al (2003) observaron que las manchas con alta proporcioacuten de suelo desnudo alto contenido de arena o alta resistencia a la penetracioacuten comprome-tiacutean la supervivencia de los plantones A modo de ejemplo las especies lentildeosas pioneras y tolerantes al estreacutes pueden ser introducidas en zonas donde se ha eliminado la hierba en micrositios maacutes xeacutericos como zonas convexas o con peores suelos laderas en solana En cambio las plantas lentildeosas interme-dias y tardiacuteas de la sucesioacuten o aquellas que tengan altos requerimientos en recursos y baja tolerancia a la sequiacutea se deberiacutean plantar en parches con elevado contenido de recursos en sitios que tengan suelos maacutes profundos poca pedregosidad exposiciones de umbriacutea o las zonas bajas de los taludes que almace-nan maacutes humedad y nutrientes Las zonas del talud con rocas en principio no necesitan recibir ningu-na actuacioacuten De este modo se pueden conseguir

sistemas maacutes heterogeacuteneos con una estructura en parches que facilitan la integracioacuten paisajiacutestica de las obras a la vez que se aumenta la diversidad bio-loacutegica Un aspecto que se debe contemplar es que el tipo de preparacioacuten del suelo va a condicionar la distribucioacuten espacial de las plantas En concreto los subsolados lineales imponen un grado de regu-laridad en la distribucioacuten de las plantas mientras que las preparaciones puntuales (veacutease apartado VI) permiten una mayor heterogeneidad

La densidad de plantas que se introduzcan inicial-mente dependeraacute de la cobertura final que se desee el tamantildeo de la especie de adulta y la mortandad esperada de las especies en el contexto ambiental de la obra Por ejemplo si se desea una cobertura del suelo medio alta (50-80) y se desea introducir un arbusto de bajo porte y una especie arboacuterea ambas con una supervivencia estimada del 50 a corto pla-zo la densidad de plantacioacuten deberaacute ser mucho maacutes alta en a primera que en la segunda 20000 frente a 700 pies ha-1 La densidad de plantacioacuten tambieacuten debe contemplar la ecologiacutea de las especies y los condicionantes ambientales del lugar de la obra Asiacute las especies que son ecoloacutegicamente semejantes o esteacuten muy emparentadas tenderaacuten a competir maacutes intensamente entre siacute que aquellas con las caracteriacutes-ticas contrarias (Valiente-Banuet y Verduacute 2008) por lo que plantaciones mixtas de especies ecoloacutegicamente semejantes deberaacuten contemplar densidades menores En lugares de mayor aridez o pobreza de nutrientes en el suelo tambieacuten deberaacuten contemplar densidades inicialmente mayores previendo una mayor mortan-dad Densidades elevadas de aacuterboles conllevaraacuten a la larga un empobrecimiento de arbustos helioacutefilos

VI PREPARACIOacuteN DEL SUELO

La compactacioacuten del sustrato es uno de los factores que maacutes dificulta el establecimiento de la vegetacioacuten lentildeosa al limitar la infiltracioacuten de agua y la penetra-cioacuten en profundidad de las raiacuteces la aireacioacuten y el volumen uacutetil de suelo para las plantas (Bejarano et al 2010) Para mitigar estos efectos es muy impor-tante realizar una preparacioacuten fiacutesica del suelo previa a la plantacioacuten La importancia de la preparacioacuten del suelo se incrementa cuanto maacutes aacuterido sea el clima o cuanto maacutes se retrase la fecha de plantacioacuten (Que-rejeta et al 2001 Saquete et al 2006 Palacios et al 2009) Las preparaciones maacutes intensas es decir las que afectan a un mayor volumen de suelo tienen un mayor efecto sobre el desarrollo de las plantas

Las preparaciones del suelo mecaacutenicas son habi-tualmente maacutes efectivas que las manuales ya que remueven mayor volumen de suelo En una siembra de Q ilex sobre margas yesiacuteferas un subsolado de 50-60 cm de profundidad incrementoacute la superviven-cia un 700 al final del verano con respecto a ho-yos manuales de 10 cm de profundidad (Nicolaacutes et al 1997 Figura 4) En una plantacioacuten de Q faginea (quejigo) en terrenos agriacutecolas abandonados no se observaron diferencias de supervivencia entre un subsolado y hoyos efectuados con retroexcavadora pero siacute de crecimiento siendo mayor en el segundo caso que produjo una mayor remocioacuten del suelo (Nicolaacutes et al 2004)

Las preparaciones del suelo que pueden aplicarse en obras de infraestructuras lineales pueden clasifi-carse en dos categoriacuteas preparaciones puntuales y preparaciones lineales Las preparaciones puntuales engloban a casillas hoyos y microcuencas bien he-chos a mano o bien con picos mecaacutenicos barrenas helicoidales o retroexcavadora o una combinacioacuten de medios mecaacutenicos y manuales (Serrada 2000) En algunas obras se utilizan inyectores de agua a alta presioacuten para abrir el hoyo Las preparaciones puntuales no implican necesariamente la apertura de hoyos ni el volteo de los horizontes del suelo

especialmente las realizadas con excavadora o pi-cos mecaacutenicos Por ejemplo para los ahoyados con retroexcavadora se debe introducir el cazo hasta la profundidad deseada y levantar el suelo sin voltear el cazo para finalmente dejarlo caer de nuevo en el mismo punto Posteriormente el operario abriraacute con un barroacuten o una azada un pequentildeo hueco don-de introducir la planta o la semilla sobre el suelo esponjado En el caso de las retroexcavadoras es preferible no usar un cazo sino solo untildeas El cazo puede ocasionar compactacioacuten en su roce con las paredes y el fondo del hoyo que las untildeas evitan

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Mayo Julio Agosto Octubre

Subsolado (50-60 profundidad)

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Figura 4 Evolucioacuten de la emergencia y supervivencia de siembras de bellotas de Quercus ilex (encina) realizadas sobre dos tipos de prepara-cioacuten del suelo subsolados de 50-60 cm de profundidad y casillas hechas a mano de 10 cm de profundidad La figura estaacute dibujada a partir de los datos de Nicolaacutes et al (1997) El experimento se realizoacute sobre margas yesiacuteferas en Guadalajara La siembra se hizo en febrero y se protegioacute de los depredadores con tubos protectores de 30 cm La potencia germinativa del lote de bellotas empleado en el estudio fue del 55 determinado en condiciones de laboratorio

Las preparaciones lineales engloban a los subsola-dos lineales que consisten en realizar cortes al sue-lo normalmente siguiendo las curvas de nivel con un apero denominado subsolador o ripper montado sobre un tractor o un buldoacutezer El subsolador puede profundizar hasta unos 60-80 cm El subsolado tam-poco produce una alteracioacuten en los horizontes del suelo y tiene una gran capacidad de infiltrar la esco-rrentiacutea superficial de agua En superficies llanas el subsolado se puede hacer cruzado La mecanizacioacuten

de la preparacioacuten del suelo dependeraacute de la pen-diente de los taludes Una profusioacuten de detalles so-bre teacutecnicas de preparacioacuten del suelo puede encon-trarse en Serrada (2000) y Steinfeld et al (2007) Como recomendacioacuten general en caso de prepara-ciones puntuales el hoyo de trabajo debe tener una dimensioacuten miacutenima de 40 times 40 times 40 cm

Los meacutetodos destinados a incrementar la fertilidad del suelo se tratan en detalle en el Capiacutetulo 6 de este libro

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VII CUIDADOS POSPLANTACIOacuteN

Los cuidados posplantacioacuten son aquellas medidas encaminadas a garantizar el establecimiento de las plantas una vez realizada la plantacioacuten o la siembra Se aplican durante un breve periacuteodo de tiempo que variacutea entre 1-5 antildeos dependiendo del tratamiento pero habitualmente no pasan de los dos antildeos que es el periacuteodo de garantiacutea que tiene la empresa cons-tructora Los principales cuidados posplantacioacuten son los siguientes

1 Riegos

Los riegos son muy importantes para garantizar nive-les adecuados de supervivencia en localidades con escasa precipitacioacuten en antildeos muy secos cuando se trabaja con especies poco resistentes a la sequiacutea o se planta fuera de las eacutepocas adecuadas (Jimeacutenez et al 2007 Rey Benayas 1998) No obstante la necesi-dad de riego se reduce significativamente o incluso pueden ser innecesaria si la toma de decisiones y la ejecucioacuten de las otras actividades de revegetacioacuten se hacen correctamente como la seleccioacuten correcta de especies la preparacioacuten del suelo y sobre todo la revegetacioacuten se hace en el periacuteodo adecuado

Habitualmente se diferencian los riegos de esta-blecimiento y los de mantenimiento Los primeros se dan inmediatamente despueacutes de la plantacioacuten y su uso se suele restringir a situaciones en las que el suelo tiene poca humedad en el momento de la plantacioacuten yo las plantaciones se han hecho muy tardiacuteamente Los riegos de mantenimiento se suelen aplicar solamente en los periacuteodos de mayor aridez En ambientes mediterraacuteneos se suele recomendar la aplicacioacuten de entre 20 y 40 l por planta en cada evento de riego (Serrada 2000) que no deben ac-tivar el crecimiento aeacutereo de la planta ya que la resistencia a factores de estreacutes se reduce El riego conviene repartirlo durante el periacuteodo de sequiacutea en lugar de aplicarse en un uacutenico riego en mitad del periodo de sequiacutea Los riegos se aplican a mano por medio de mangueras conectadas a cisternas moacutevi-les (Figura 5) Ahora bien esto solo es posible si la cisterna de riego tiene acceso al lugar de trabajo y en terrenos de poca pendiente Otra alternativa es montar un sistema de riego por goteo conectado a unos depoacutesitos de agua que perioacutedicamente son rellenados Esta opcioacuten es cara y se restringe ha-bitualmente a las medianas aunque tambieacuten seriacutea deseable en taludes con pendientes pronunciadas y en las que el riego se va a mantener durante varios

antildeos Los riegos deben planificarse correctamente porque encarecen enormemente los costes de los proyectos de revegetacioacuten

2 Control de la competencia con otras plantas

En la restauracioacuten de infraestructuras lineales habitual-mente se persiguen dos objetivos ecoloacutegicos proteger al suelo de la erosioacuten y acelerar la sucesioacuten secundaria consiguiendo asiacute comunidades de plantas maacutes desa-rrolladas y estables El primer objetivo se puede con-seguir estableciendo una cubierta de hierbas densa mientras que ambos objetivos se pueden alcanzar con especies lentildeosas Sin embargo las especies lentildeosas crecen maacutes despacio que las hierbas por lo que a corto plazo el primer objetivo se puede alcanzar maacutes raacutepidamente con hierbas Ambos objetivos se ven fa-vorecidos por separado cuando se incrementa la fertili-dad del suelo y la disponibilidad hiacutedrica Sin embargo bajo estas condiciones la competencia entre plantas herbaacuteceas y lentildeosas es maacutes intensa (Loumlf 2000 Rey Benayas et al 2005) y por tanto estos dos objetivos primordiales pueden entrar en conflicto

La mayoriacutea de especies herbaacuteceas que se desarro-llan en los taludes son ruderales anuales esto es especies que completan su ciclo de vida en un antildeo y que estaacuten adaptadas a vivir en sitios muy per-turbados (Grime 2001) Ademaacutes son maacutes eficaces en explotar los recursos del suelo que las especies lentildeosas porque crecen maacutes raacutepidamente tienen raiacute-ces con una elevada longitud especiacutefica y una ma-yor capacidad intriacutenseca de absorcioacuten de nutrientes (Grime and Hunt 1975 Eissenstat 1992) La compe-tencia entre las especies herbaacuteceas y lentildeosas es maacutes intensa cuanto menor es la disponibilidad de recursos edaacuteficos de forma que la implantacioacuten de las plantas lentildeosas suele fracasar si no se eliminan las hierbas (Rey Benayas et al 2005 Goacutemez-Aparicio 2009 Cuesta et al 2010a Cuesta et al 2010b) Sin embargo para una especie dada la capacidad com-petitiva de los plantones lentildeosos depende de sus atributos funcionales los cuales se pueden deter-minar seguacuten coacutemo se cultive la planta en el vive-ro (van den Driessche 1991a Villar-Salvador et al 2004) Asiacute en P halepensis los plantones de gran tamantildeo y elevada concentracioacuten de nitroacutegeno en sus tejidos tienen mayor capacidad de competencia con las hierbas que los plantones de atributos contrarios (Figura 3 Cuesta et al 2010a)

A B

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Figura 5 Detalles de tubos de riego por goteo en la mediana de la Autoviacutea A-9 (Almeriacutea) (A) y en una ladera plantada de encina en Cazorla (Jaeacuten) (B) una cisterna de agua para alimentar un sistema de riego por goteo en una repoblacioacuten en Ayora (Valencia) (C) y regando a mano con manguera conectada a una cuba situada en la parte superior de la infraestructura en un talud del tren de alta velocidad a Maacutelaga (Humil-ladero) (D) (Fotos Pedro Villar y Marisa Martiacutenez)

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Un aumento de los recursos edaacuteficos sobre todo agua relaja la competencia tendieacutendose a interaccio-nes maacutes o menos neutras en situaciones intermedias de disponibilidad de recursos edaacuteficos (Figura 6) Sin embargo cuando los recursos edaacuteficos superan un cierto umbral y se hacen muy abundantes las hier-bas y las lentildeosas pueden volver a experimentar com-petencia principalmente por la luz Sin embargo el resultado de la competencia con las hierbas diferi-raacute dependiendo del tipo de planta lentildeosa Para las

especies pioneras de la sucesioacuten la mayoriacutea de las cuales son helioacutefilas se traduciraacute en un efecto nega-tivo ya que las hierbas impediraacuten el acceso a la luz Sin embargo las especies intermedias y tardiacuteas de la sucesioacuten que suelen regenerarse mejor en ambientes de luz moderada sufriraacuten menos la competencia que las pioneras de la sucesioacuten La Figura 6 sintetiza este proceso y puede constituir un modelo conceptual de toma de decisiones sobre el control de las especies herbaacuteceas cuando se introducen especies lentildeosas

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Especies tardiacuteas en la sucesioacuten

Herbaacuteceas positivas para especies tardiacuteas en la sucesioacuten

Herbaacuteceas negativas se recomienda eliminarlas

Especies pioneras

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1- Disponibilidad de recursos en el suelo +

Figura 6 Modelo conceptual del efecto de las plantas herbaacuteceas sobre las lentildeosas dependiendo de su estrategia ecoloacutegica (pionera frente a tardiacutea de la sucesioacuten) y el nivel de recursos disponibles en el suelo Por encima de la liacutenea punteada estos efectos son positivos y por debajo son negativos

No debe eliminarse la cubierta de hierbas en toda la superficie del talud cuando se desea implantar las lentildeosas Basta eliminar la hierba en un halo de 05-1 m de diaacutemetro alrededor de cada plantoacuten para relajar la competencia (Figura 7) De esta manera a la vez que reducimos la competencia sobre las espe-cies lentildeosas de intereacutes se garantiza una cobertura del suelo suficiente para evitar la erosioacuten y fomentar otras funciones ecoloacutegicas como el incremento de materia orgaacutenica en el suelo y la creacioacuten de haacutebitat para otros organismos

El control de la competencia herbaacutecea se puede realizar por procedimientos fiacutesicos yo quiacutemicos Los meacutetodos fiacutesicos implican la remocioacuten de la hier-ba por medio de desbroces y escardas o el impedi-mento de su crecimiento por medio de una barrera

fiacutesica o mulch Estos uacuteltimos consisten en piedras o telas y mantas permeables de fibras vegetales o sinteacuteticas que se colocan pegadas al suelo alrede-dor del plantoacuten y que dificultan la emergencia de las plaacutentulas de herbaacuteceas (Pentildeuelas et al 1996) y reducen la evaporacioacuten de agua del suelo de forma anaacuteloga a como lo hace la hojarasca de muchas plantas (Rebollo et al 2001) Las escardas o des-broces deben planificarse cuando la hierba tiene un tamantildeo suficiente para competir con la lentildeo-sa Realizarlas demasiado pronto no es efectivo y probablemente habraacute que repetirlas maacutes adelante mientras que tampoco se deben retrasar mucho porque la hierba ya estaraacute compitiendo intensa-mente con la planta lentildeosa Los meacutetodos quiacutemicos de control de la competencia herbaacutecea se realizan con herbicidas siendo recomendable aplicar una

mezcla de herbicidas de contacto y residuales es-peciacuteficos para gramiacuteneas compuestas o legumino-sas las familias predominantes en los herbazales de los taludes Es esencial que la planta lentildeosa sea protegida por un tubo al aplicarse el herbicida La eliminacioacuten total de las hierbas alrededor de la planta lentildeosa deja el suelo desnudo favoreciendo

la evaporacioacuten Por ello no se deben retirar los restos de las hierbas en las escardas o siegas porque reducen la evaporacioacuten de agua y el reca-lentamiento del suelo (Papavassiliou 1991 Sack y Grubb 2002) aportan fertilidad al suelo dificultan la emergencia de futuras hierbas y dicha retirada encarece el mantenimiento

A B

Figura 7 (A) Trabajadores segando la hierba en un talud del tren de alta velocidad a Maacutelaga (Humilladero) (B) Foto del halo sin hierba alre-dedor de dos plantones de encina en Santa Cruz de Mudela Ciudad Real (Fotos Marisa Martiacutenez y Pedro Villar)

3 Proteccioacuten frente a herbiacutevoros

Los herbiacutevoros pueden dantildear y matar las plantas introducidas siendo las aves los ungulados y roe-dores los que maacutes dantildeo causan Las aves depredan baacutesicamente semillas mientras que los ungulados tanto silvestres como domeacutesticos se alimentan de plantas de cualquier edad Finalmente entre los roedores los ratones comen fundamentalmente se-millas y plaacutentulas en estadios de vida incipientes mientras que los conejos y liebres dantildean tanto a las plaacutentulas como los plantones de mayor edad Para reducir la depredacioacuten de las semillas aplicadas a voleo y favorecer su germinacioacuten conviene ente-rrar las semillas (Pentildeuelas et al 2002 Goacutemez 2004) La proteccioacuten de las plantas lentildeosas se puede lle-var a cabo bien por medio de vallas que encierran amplias zonas o bien protegiendo individualmen-te cada planta La proteccioacuten individual tambieacuten se puede practicar con las siembras puntuales Las vallas son uacutetiles para evitar los ungulados y si se entierran tambieacuten sirven para evitar a los conejos y liebres La proteccioacuten individual de cada planta se puede llevar a cabo con mallas y tubos protectores Las mallas pueden ser de plaacutestico y metaacutelicas (Figura

8) En la mayoriacutea de los casos deben ir sujetas con tutores y el borde inferior debe quedar ligeramente enterrado Los tubos protectores son de plaacutestico de entre 060 y 2 m de longitud con paredes continuas si bien cada vez se venden maacutes modelos con aguje-ros de ventilacioacuten Los tubos deben ser enterrados aproximadamente entre un cuarto y un tercio de su longitud y por ello los hacen muy uacutetiles para prote-ger siembras puntuales La principal diferencia con las mallas es que los tubos alteran significativamen-te el microclima alrededor de la planta La mayoriacutea de ellos reduce la radiacioacuten y la concentracioacuten de CO

2 e incrementa la temperatura y la humedad relati-

va del aire (Bergez y Dupraz 2000 Bellot et al 2002 Oliet y Jacobs 2007) Esta alteracioacuten del microclima aeacutereo de la planta puede tener efectos desiguales para el establecimiento de las especies En general para las especies lentildeosas pioneras de la sucesioacuten que son mayoritariamente helioacutefilas los tubos pro-tectores no incrementan la supervivencia e incluso la pueden reducir Plantas como el romero las jaras la retama o los pinos mediterraacuteneos no tienden a be-neficiarse de los tubos protectores En cambio para especies intermedias y tardiacuteas de la sucesioacuten que se reclutan en micrositios con una cierta sombra

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como la encina el madrontildeo o especies caducifolias los tubos protectores incrementan la supervivencia y el crecimiento (Oliet et al 2003 Pueacutertolas et al 2010) especialmente si los tubos tienen agujeros de ventilacioacuten (Figura 9) La ventilacioacuten reduce la

temperatura e incrementa la concentracioacuten de CO2

Los tubos protectores deben ser retirados cuando las plantas hayan superado ampliamente la longitud del tubo y se puedan mantener erguidas por siacute solas una vez retirado el tubo

VIII PREGUNTAS CLAVE

iquestNecesito introducir plantas lentildeosas para cumplir mis objetivos de revegetacioacuten

Es muy recomendable especialmente en ambientes mediterraacuteneos ya que aceleran la sucesioacuten secun-daria en muchos casos permiten una integracioacuten funcional y paisajiacutestica de la infraestructura lineal mejor que las herbaacuteceas y su mantenimiento si estaacuten bien seleccionadas es menor que en las her-baacuteceas

En caso de que se decida revegetar con lentildeosas iquestcuaacuteles son los principales limitantes para el desarrollo de los plantones en la obra y queacute medidas correctoras puedo tomar para reducirlas

El estreacutes hiacutedrico el friacuteo la baja fertilidad y la compactacioacuten del suelo la competencia con las especies herbaacuteceas o el dantildeo producido por los herbiacutevoros son los mayores problemas en el establecimiento de lentildeosas Las medidas dependeraacuten de las caracteriacutesticas ecoloacutegicas de las especies que se implanten pero en general usar plantas y semillas de calidad plantar en la eacutepoca adecuada y en micrositios de mayor disponibilidad de recursos en conjunto con la proteccioacuten contra los herbiacutevoros y la eliminacioacuten de las especies herbaacuteceas en los hoyos de plantacioacuten es suficiente para asegurar un buen nivel de eacutexito en la plantacioacuten

iquestQueacute criterios debo tener en cuenta a la hora de seleccionar las especies y los materiales de reproduccioacuten

La seleccioacuten de especies debe tener en cuenta que estas esteacuten adaptadas a los factores de estreacutes dominantes en la zona y debe incluir diversas es-pecies para incrementar la diversidad y resistencia a las perturbaciones de la zona restaurada Lo maacutes sencillo es escoger especies y materiales de reproduccioacuten que se desarrollen de forma natu-ral en las cercaniacuteas de la obra o en zonas con caracteriacutesticas climaacuteticas similares El material de

reproduccioacuten debe ser de calidad es decir con las caracteriacutesticas morfofisioloacutegicas adecuadas a la zona sin enfermedades ni deformaciones en las raiacuteces

iquestConviene regar o fertilizar

El riego no es estrictamente necesario si se han seleccionado las especies lentildeosas adecuadas la revegetacioacuten se hace en la eacutepoca debida el reacutegi-men de precipitaciones es normal y el material de reproduccioacuten es de buena calidad No obstante el riego se puede plantear en climas muy secos o en antildeos maacutes secos de lo normal En caso de tener suelos muy pobres se puede fertilizar pero siempre con dosis bajas La fertilizacioacuten depende-raacute de las caracteriacutesticas iniciales del sitio o de si existen sitios especialmente feacutertiles donde poda-mos plantar

iquestCoacutemo dispongo mis plantas en el espacio

Depende de si las especies seleccionadas son pioneras o maacutes tardiacuteas en la sucesioacuten y de su estrategia para resistir la sequiacutea Las primeras es-pecialmente si no tienen raiacuteces profundas se pue-den plantar en suelos maacutes pobres en nutrientes y en lugares que retengan menos humedad En cambio las especies maacutes tardiacuteas en la sucesioacuten y menos resistentes a la sequiacutea requieren lugares maacutes feacutertiles y huacutemedos como el pie del talud zonas llanas y menos expuestas a la insolacioacuten

iquestSon necesarias preparaciones del suelo

Son muy importantes cuando el suelo estaacute muy compactado de modo que dificulte el enraiza-miento y la infiltracioacuten del agua Las prepara-ciones someras son poco uacutetiles y lo miacutenimo que se debe realizar son ahoyados de 40 x 40 x 40 cm Dependiendo de la pendiente es preferible el uso de maquinaria ya que permite prepara-ciones maacutes intensas y el rendimiento de trabajo es mayor

A B

C D

Figura 8 Diferentes modelos de tubos protectores En la imagen (A) se muestra un tubo protector de 180 m sujeto con dos postes y protegido todo ello con malla metaacutelica Este sistema estaacute pensado para evitar los dantildeos causados por grandes herbiacutevoros Las imaacutegenes B y C muestran dos tipos de tubos protectores de O6 m agujereados para favorecer su ventilacioacuten La imagen D muestra una malla de plaacutestico usada frente a pequentildeos herbiacutevoros como conejos y liebres que afecta poco al microclima de la planta (Fotos Pedro Villar)

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X UN EJEMPLO DE EacuteXITO

iquestDoacutende

Almoguera (Guadalajara) sobre margas yesiacuteferas con una precipitacioacuten y temperatura media anual de 415 mm y 134 degC respectivamente

iquestQueacute se hizo

Se plantaron en enero plantones de Quercus ilex (encina) de una savia que se repartieron en tres tratamientos de proteccioacuten de la planta dos tipos de tubos protectores ventilado y sin ventilacioacuten y un control (sin tubo protector) El tubo protector usado fue regTubex-Press 065 de 60 cm de longi-tud y transluacutecido El tubo ventilado se consiguioacute practicando agujeros de 25 cm de diaacutemetro a dos niveles a 10 y 40 cm del borde superior A cada altura se hicieron cuatro agujeros La preparacioacuten del suelo consistioacute en subsolados a 60 cm de

IX ERRORES HABITUALES

Uso de especies y procedencias no adaptadas a las condiciones locales

Frecuentemente se usan las mismas especies nor-malmente las maacutes faacuteciles de conseguir por igual en todas las obras y dentro de una obra su distribu-cioacuten no sigue criterios con base ecoloacutegica Esto es un error muy grave ya que seleccionar especies y dentro de estas las procedencias mejor adaptadas a las condiciones ambientales locales es fundamental para el eacutexito de la revegetacioacuten (veacutease apartado II)

Meacutetodos y eacutepocas de revegetacioacuten inadecuados

No se debe usar como meacutetodo principal de revege-tacioacuten la siembra de plantas lentildeosas de semillas pe-quentildeas o de baja capacidad germinativa El uso de estaquillas se desaconseja en ambientes muy secos Por otro lado las obras de infraestructuras linea-les habitualmente tienen plazos de ejecucioacuten muy constrentildeidos en los que a menudo los trabajos de revegetacioacuten se ven abocados a realizarse en eacutepo-cas inadecuadas para el establecimiento de las plan-tas Cualesquiera que sean las especies empleadas plantar o sembrar en una eacutepoca inadecuada (muy cerca o durante el verano en mitad del invierno en estaciones muy friacuteas) conduce al fracaso La revege-tacioacuten debe hacerse en los periacuteodos huacutemedos del antildeo y no muy friacuteos (veacutease apartado III)

Mala calidad de planta

Las caracteriacutesticas morfoloacutegicas fisioloacutegi-cas y sanitarias de las plantas determinan su

capacidad de establecimiento El uso de plantas enfermas con una morfologiacutea inadecuada raiacute-ces deformadas poco fertilizadas y cultivadas en contenedores muy pequentildeos y con cepello-nes secos en el momento de la plantacioacuten es una garantiacutea de fracaso Los plantones deben estar morfoloacutegicamente bien proporcionados sanos y sin heridas y deben tener un cepe-lloacuten compacto y sin deformaciones en las raiacuteces para que no se desequen recalienten o se gol-peen durante su transporte y permanencia en la obra (veacutease apartado IV)

Malas (o ausencia de) preparaciones del suelo y condiciones edaacuteficas muy limitantes

La falta de preparaciones del suelo o bien prepa-raciones muy someras que no consigan reducir la compactacioacuten del suelo y aumenten el volumen efectivo de enraizamiento asiacute como la baja ferti-lidad edaacutefica son factores que limitan el estable-cimiento incluso de las especies maacutes resistentes (veacutease apartado VI)

Ausencia de cuidados posplantacioacuten

Al finalizar la plantacioacuten o la siembra se deben procurar una serie de cuidados encaminados a aportar recursos crear las condiciones y mini-mizar las interacciones negativas con otros or-ganismos hasta que la planta se establezca y pueda seguir desarrollaacutendose por siacute sola (veacutease apartado VII)

Figura 9 Influencia del tipo de tubo protector (sin tubo tubo sin ventilacioacuten y tubo ventilado) en la su-pervivencia de Quercus ilex (encina) al final del primer verano La figura estaacute hecha a partir de los datos de Nicolaacutes et al (1997)

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20

10

0

Sin tubo protector Tubo protector sin ventilacioacuten Tubo protector con ventilacioacuten

Supe

rviv

enci

a (

)

profundidad y no se aplicoacute ninguacuten riego (Nicolaacutes et al 1997)

iquestQueacute ocurrioacute

Los tubos protectores especialmente los venti-lados aumentaron significativamente la supervi-vencia con respecto al control despueacutes del primer verano cuya supervivencia al comienzo del otontildeo fue tan solo del 5 Se atribuye la elevada su-pervivencia (~60) de las encinas en los tubos ventilados con respecto al control (Figura 9) por-que redujeron la radiacioacuten un factor que cuando se da en combinacioacuten con estreacutes hiacutedrico causa la fotoinhibicioacuten de los fotosistemas de la planta reduciendo en consecuencia su capacidad foto-sinteacutetica Ademaacutes el microclima dentro del tubo ventilado fue menos desecante que el del tubo sin ventilacioacuten

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Ecotecnologiacutea aplicada a la restauracioacuten de infraestructuras de transporte

Santiago Soliveres Valentiacuten Contreras Joatildeo Paulo Fernandes Jordi Cortina Pablo Garciacutea-Palacios Marisa Martiacutenez y Jorge Fort

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CAPIacuteTULO 7 Ecotecnologiacutea aplicada a la restauracioacuten de infraestructuras de transporte

Santiago Soliveres Valentiacuten Contreras Joatildeo Paulo Fernandes Jordi Cortina Pablo Garciacutea-Palacios Marisa Martiacutenez y Jorge Fort

I INTRODUCCIOacuteN Y OBJETIVOS

La ecotecnologiacutea1 es un concepto surgido a princi-pios de la deacutecada de los sesenta La definicioacuten de este teacutermino ha generado mucha discusioacuten en la lite-ratura cientiacutefica debido principalmente a la amplitud de campos donde estas teacutecnicas pueden aplicarse Entre las definiciones maacutes aceptadas y aplicables al contexto de la restauracioacuten de infraestructuras li-neales estaacute la que define ecotecnologiacutea como la aplicacioacuten de principios pertenecientes a la ingenie-riacutea (disentildeo monitorizacioacuten y construccioacuten) para de-sarrollar nuevas teacutecnicas usando normalmente como base material vegetal que permitan acelerar la res-tauracioacuten ecoloacutegica y paisajiacutestica de aacutereas gravemen-te degradadas Pese a ser un concepto relativamente nuevo el uso de materiales vegetales para reducir la erosioacuten en ingenieriacutea civil viene practicaacutendose des-de antiguo las primeras referencias del uso de este tipo de materiales en China datan desde hace maacutes de 2000 antildeos siendo ya ampliamente utilizadas en Europa desde el siglo xvi (Lewis 1999) El uso de estas tecnologiacuteas es recomendable cuando los procesos naturales o el manejo de estos no son su-ficientes para asegurar la estabilizacioacuten y posterior restauracioacuten de las obras Otras partes del presente libro definen cuaacuteles son los procesos naturales que intervienen en la colonizacioacuten vegetal y coacutemo pode-mos ayudar a acelerarlos (Capiacutetulos 5 y 6) por lo que en este capiacutetulo nos centraremos en la discusioacuten

1 En este capiacutetulo nos referiremos a ecotecnologiacutea como sinoacutenimo de bioingenieriacutea Una discusioacuten maacutes detallada de estos conceptos estaacute maacutes allaacute del aacutembito de este manual

de las medidas ecotecnoloacutegicas aplicadas maacutes co-muacutenmente cuando estos procesos estaacuten limitados

Las medidas ecotecnoloacutegicas disponibles son nume-rosas y variadas pero las empleadas en taludes de obras de infraestructuras lineales presentan cinco objetivos fundamentales a) restituir la capacidad de los taludes para retener el agua y el suelo b) inte-grarlos visualmente c) facilitar la colonizacioacuten y es-tablecimiento de la vegetacioacuten d) reducir los costes de mantenimiento y e) aumentar la seguridad vial En este capiacutetulo hemos organizado estas teacutecnicas en funcioacuten de los procesos geoecoloacutegicos sobre los que actuacutean englobaacutendolas en cuatro grandes grupos

bull Teacutecnicas destinadas a evitar la erosioacuten donde es im-posible establecer una cubierta vegetal suficiente

bull Teacutecnicas destinadas a incrementar la fertilidad del suelo para fomentar una mayor cobertura y produccioacuten vegetal

bull Teacutecnicas para facilitar la llegada y establecimiento de nuevas especies normalmente herbaacuteceas alliacute donde la colonizacioacuten natural se ve dificultada

bull Teacutecnicas destinadas a la introduccioacuten y estable-cimiento de especies de aacuterboles y arbustos para acelerar la sucesioacuten secundaria reduciendo asiacute los costes de mantenimiento de los taludes

La utilizacioacuten de plantas y de vegetacioacuten como mate-rial de construccioacuten presenta ventajas pero tambieacuten limitaciones que interesa tener siempre presentes (Tabla 1)

Tabla 1 Ventajas e inconvenientes de las plantas y de los materiales inertes como materiales de construccioacuten

UTILIZACIOacuteN DE LA VEGETACIOacuteN COMO MATERIAL DE CONSTRUCCIOacuteN

UTILIZACIOacuteN DE MATERIALES INERTES COMO MATERIAL DE CONSTRUCCIOacuteN

VENTAJAS DESVENTAJAS VENTAJAS DESVENTAJAS

Normalmente no estaacute afectada por procesos de degradacioacuten Pueden proporcionar una estabilizacioacuten creciente y presentar una capacidad regenerativa intriacutenseca

Cumple su funcioacuten protectora de un modo elaacutestico absorbiendo los elementos y acciones lsquoagresivasrsquo disminuyendo o anulando su intensidad

Ayuda a restituir funciones bioloacutegicas y ecoloacutegicas

Tiene una mayor integracioacuten esteacutetica y paisajiacutestica

No cumple en todas las situaciones las exigencias de consolidacioacuten y seguridad requeridas

Es maacutes sensible a las condiciones ambientales del sitio y sus variaciones temporales

Solo alcanza su plena eficiencia teacutecnica tras un cierto intervalo de tiempo

Son maacutes estables

Son maacutes independientes de las caracteriacutesticas del sitio y su aplicacioacuten no estaacute limitada temporalmente

Funcionan mejor a corto plazo

No poseen capacidad de autorregeneracioacuten por lo que tienden a perder su eficiencia a largo plazo

Funcionan como estructuras constructivas riacutegidas o muy poco deformables frente a las condiciones ambientales

Constituyen normalmente elementos extrantildeos en el paisaje

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Estas teacutecnicas consisten en la aplicacioacuten de sistemas vegetativos combinados o no con otros materiales o sistemas constructivos dirigida a consolidar zonas inestables recuperar aacutereas degradadas y encuadrar otras intervenciones constructivas Nunca estaacute de maacutes enfatizar que el objetivo de la ecotecnologiacutea no son las teacutecnicas y materiales constructivos com-plementarios sino la instalacioacuten eficaz de la vege-tacioacuten y que por tanto en las ocasiones donde la instalacioacuten de vegetacioacuten pueda darse sin ayuda de estas teacutecnicas en el tiempo y forma adecuados es-tas no seraacuten necesarias (Figura 1) Por ejemplo las mantas orgaacutenicas o los muros de gaviones deben ser considerados como apoyos transitorios hacia la plena instalacioacuten de la vegetacioacuten con excepcioacuten de

las situaciones en que expliacutecitamente la naturaleza del factor de riesgo o del problema que se propone resolver impliquen la necesidad de una estructura inerte que complemente a largo plazo la accioacuten de la vegetacioacuten cuando esta sea incapaz de asegurar las condiciones de seguridad exigidas Por tanto en las condiciones en que no sea necesaria esta estructura de apoyo y la vegetacioacuten se pueda instalar por siacute sola esta teacutecnica no seriacutea necesaria

El objetivo principal de este capiacutetulo es familiarizar a los lectores con las principales medidas ecotec-noloacutegicas disponibles describir su funcionamiento y modo de aplicacioacuten e identificar las condiciones oacuteptimas para su aplicacioacuten

Figura 1 Aacuterbol de criterios generales que debe seguir un proceso de toma de decisiones para la restauracioacuten de una infraestructura lineal dependiendo de los casos particulares a los que nos enfrentemos Las diferentes medidas se detallan maacutes adelante en este capiacutetulo

Antes de la obra 1 Minimizar afeccioacuten de la obra

- Dejar aacutereas cercanas a la obra con vegetacioacuten natural intacta

- Dejar tanto como sea posible franjas de vegetacioacuten en los bordes del talud

- Procurar que la obra tenga impacto sobre la menor superficie posible

- Reducir las pendientes de los taludes tanto como sea posible

2 iquestEstablecimiento vegetal posible de forma natural

3 iquestEs posible asegurar el establecimiento vegetal mediante topsolling

4 Condiciones ambientales retrasan colonizacioacuten vegetal

Aplicar topsolling

No intervenir

SIacute

SIacute

SIacute

NO

NO

NO

Aplicar medidas ecotecnoloacutegicas

5 Condiciones ambientales imposibilitan colonizacioacuten vegetal (elevadas pendientes sustrato de roca viva)

Geomallas muros gaviones

a) baja fertilidad del suelo

b) fuentes de semillas lejanas

c) elevado peligro de erosioacuten

hidrosiembra con especies locales plantacioacuten de lentildeosas

geosinteacuteticos fajinas mantas orgaacutenicas (dependeraacute del caso)

fertilizar (orgaacutenicoinorgaacutenico) mantas orgaacutenicasSIacute

SIacute

SIacute

NO

NO

NO

II TEacuteCNICAS DESTINADAS A EVITAR PROCESOS EROSIVOS

Durante la ejecucioacuten de la obra y antes de la aplicacioacuten de estas teacutecnicas deberaacuten tenerse en cuenta aquellas medidas anteriormente apunta-das para minimizar el impacto de la obra sobre la vegetacioacuten y la resistencia del talud a la ero-sioacuten Esto es reducir al maacuteximo las pendientes de los taludes y la destruccioacuten de la vegetacioacuten circundante Pero en muchas ocasiones y a pesar de estos esfuerzos las caracteriacutesticas de deter-minados taludes (pendientes muy pronunciadas estructura rocosa etc) hacen necesario aplicar teacutecnicas especiales para evitar procesos erosivos y problemas de estabilidad Esto facilita a su vez la integracioacuten del talud en el entorno y la colonizacioacuten vegetal con ciertas garantiacuteas de eacutexi-to Son muchas las teacutecnicas disponibles para el control de la erosioacuten pudiendo utilizarse por siacute solas o en combinacioacuten con la introduccioacuten de especies herbaacuteceas y lentildeosas (pe tierra arma-da) o junto con otras teacutecnicas ecotecnoloacutegicas para incrementar el eacutexito de la restauracioacuten (pe muros verdes) Cabe destacar la necesidad de di-ferenciar los conceptos de estabilizacioacuten de talu-des y proteccioacuten frente la erosioacuten superficial La mayoriacutea de sistemas que se describiraacuten en este capiacutetulo son aptos para mitigar procesos erosivos que generen un problema de estabilidad pero siempre deben ser utilizados en taludes construc-tivamente estables A continuacioacuten se presentan las medidas maacutes utilizadas con recomendaciones especiacuteficas sobre su aplicacioacuten Antes de leer so-bre estas medidas referimos al lector al Capiacutetulo 2 de este manual donde se detallan algunas con-sideraciones geomorfoloacutegicas que atantildeen al uso de estas teacutecnicas

1 Mallas o enrejados metaacutelicos

Son estructuras metaacutelicas de alta resistencia a la rotura Se utilizan para evitar la caiacuteda de piedras sobre la calzada Solo son recomendables cuando se pretende detener la erosioacuten de bolos o elemen-tos gruesos del talud pero no son uacutetiles para re-tener los finos Para retener estos se recomienda combinar mallas metaacutelicas geomallas tridimensio-nales y mantas o redes orgaacutenicas (explicadas maacutes adelante) como soporte de trepadoras y de elemen-tos naturales que colonicen el talud Esta teacutecnica mixta estaacute dando buenos resultados mejorando el establecimiento vegetal y la integracioacuten paisajiacutestica (Figura 2)

Figura 2 Manta orgaacutenica combinada con un enrejado metaacutelico en un talud del polideportivo de Alhama Granada

2 Sistemas tridimensionales geomallas volumeacutetricas

La geomalla volumeacutetrica es un sistema tridimen-sional formado por distintas mallas termosoldadas con componentes tratados para resistir radiaciones ultravioleta y que conserva sus caracteriacutesticas me-caacutenicas durante no menos de siete antildeos Permiten trabajar con pendientes de maacutes de 40deg y son muy eficaces en el control de erosioacuten gracias a la reten-cioacuten de finos

Las mallas volumeacutetricas se utilizan en taludes sobre todo de desmonte donde no se pueda rea-lizar una aportacioacuten de tierra vegetal adecuada para crear suelo en taludes con material pedre-goso abundante terrenos margosos bocas de tuacuteneles etc Tambieacuten son muy utilizadas en tra-tamientos de sistemas fluviales encauzamiento de barrancos proteccioacuten de cauces con riesgo de avenidas en combinacioacuten con otros tratamientos

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de bioingenieriacutea como los lechos de ramaje vivo biorrollos estaquillados etc Poseen altas prestaciones a unas condiciones hidraacuteulicas de-terminadas y calculadas despueacutes de realizar las distintas comprobaciones de estabilidad estaacutetica rugosidad hidraacuteulica y estabilidad dinaacutemica del sistema El espesor miacutenimo que deben tener es-tas mallas es de 20 mm y la apertura de malla miacutenima debe ser le10 mm Sobre estas mallas se realiza una proyeccioacuten de sustrato posterior com-puesta habitualmente por turba fibra de coco fibra de madera estabilizante fertilizantes orgaacute-nicos y semillas de plantas adaptadas a las con-diciones del sitio Esta proyeccioacuten permite crear un lecho de siembra adecuado en taludes con ausencia de tierra vegetal permitiendo la germi-nacioacuten y desarrollo de las plantas en el periodo maacutes criacutetico de establecimiento favoreciendo el desarrollo del sistema radicular en el interior del talud y creando un entramado integral de raiacuteces-suelo-geomalla que muestra una elevada resis-tencia a la traccioacuten

Son sistemas ideados para permanecer en el tiempo sin variar sus caracteriacutesticas mecaacutenicas donde la re-vegetacioacuten y regeneracioacuten se va a establecer a largo plazo Son particularmente interesantes en aquellas situaciones en las que otros tipos de sistemas orgaacute-nicos no funcionan debido a que se degradan y pier-den sus propiedades Este sistema es muy utilizado en sistemas combinados para la estabilizacioacuten de taludes conjuntamente con mallas de triple torsioacuten redes de cable etc

3 Sistemas de confinamiento celular geoceldas

Sistema de confinamiento celular estructurado por tiras de polietileno de alta densidad texturi-zadas y perforadas para aumentar la rugosidad y facilitar el drenaje termosoldadas a una distan-cia determinada para la formacioacuten de alveacuteolos Su estructura en forma de acordeoacuten bidimensio-nal una vez abierta forma un sistema alveolar que permite retener distintos tipos de materia-les Este sistema puede albergar espesores de tierra vegetal de entre 5 y 20 cm dependiendo de la anchura de las cintas permitiendo realizar plantaciones y siembras en su seno Su principal inconveniente es que solo se puede emplear en

pendientes de hasta 35deg ya que su relleno va a estar supeditado a la cohesioacuten y al aacutengulo de rozamiento interno del suelo Este tratamiento suele ser inviable en desmontes debido a las pendientes acusadas que suelen presentar Por el contrario es muy utilizado en canalizaciones y encauzamiento de barrancos donde las pendien-tes no suelen superar los 30deg

4 Mantas orgaacutenicas

Son productos relacionados con los geotextiles y estaacuten compuestos por mallas y fibras naturales (pe fibra de coco yute paja esparto) o sinteacuteticas (pe polipropileno) Se emplean para aplicaciones geoteacutecnicas de control de la erosioacuten y de mejora de las condiciones del suelo Su composicioacuten (muy variable seguacuten el tipo y disposicioacuten de las mallas y fibras utilizadas) condicionaraacute su potencialidad y las teacutecnicas de aplicacioacuten Sirven para frenar la erosioacuten laminar sobre taludes rellenar regueros como revestimiento de muros soporte de trepa-doras etc Estas mallas favorecen la formacioacuten de suelo mediante la retencioacuten de finos en escorren-tiacuteas y el aporte de materia orgaacutenica al suelo tras su descomposicioacuten Tienen la ventaja de controlar la evaporacioacuten regulando la temperatura y aumen-tando la infiltracioacuten de agua de lluvia en el suelo de manera que mejora las condiciones de humedad en zonas de xericidad acusada Se emplean para dar coherencia a las partiacuteculas de suelo fijando a su vez la vegetacioacuten espontaacutenea o hidrosem-brada sobre el mismo Pueden ser prescritas para situaciones muy diversas de erosioacuten laminar alta cunetas y caacutercavas restauracioacuten de maacutergenes de riacuteos o taludes con pendientes de entre 25-45deg Las mantas orgaacutenicas deben ser permeables a los ele-mentos finos del suelo y a la recepcioacuten de semillas tanto aportada artificialmente como la dispersada de manera natural (Figura 3) En el caso de que tengamos suelos de granulometriacutea gruesa o vegeta-cioacuten ya establecida se recomiendan mallas o redes orgaacutenicas yo sinteacuteticas Dada la adaptabilidad de la manta a las irregularidades del terreno se puede forrar el contorno de las caacutercavas y barranqueras y con el apoyo de encadenados de piedra o fajinados vegetales (lsquoplantas vivasrsquo) o artificiales (biorrollos) para dar solucioacuten a restauraciones de cabeceras de cuenca y encauzamientos de gran aplicacioacuten en el control de avenidas

Figura 3 Red orgaacutenica de fibra de coco instalada un tramo de AVE en Humilladero (Maacutelaga) Obseacutervese coacutemo la manta permite la ger-minacioacuten de las especies herbaacuteceas

Es fundamental elegir el tipo de manta adecuado pues a los limitantes comentados anteriormente se debe antildeadir el riesgo de que se degrade con excesiva rapidez arrastrando los soacutelidos acumu-lados y la vegetacioacuten existente Si estas mantas se refuerzan con mallas sinteacuteticas de gran du-racioacuten se pueden utilizar incluso sobre taludes muy verticales situaciones donde hasta ahora no se interveniacutea en prevencioacuten de la erosioacuten eoacutelica e hiacutedrica

5 Mallas o redes orgaacutenicas yo sinteacuteticas

Son al igual que las mantas orgaacutenicas productos relacionados con los geotextiles de composicioacuten de fibras similares (coco yute o polipropileno) pero que por definicioacuten sus elementos constituti-vos (hilos) son porcentualmente menores que sus huecos por lo que se emplean como elementos de refuerzo en aplicaciones geoteacutecnicas y de res-tauracioacuten de la vegetacioacuten ya que entre la luz de malla se originaraacuten pequentildeos diques de conten-cioacuten de las microcaacutercavas del talud que facilitaraacuten el paso de vegetacioacuten nacida Son por ello un recurso diferente de las mantas orgaacutenicas al ser especialmente indicadas para el refuerzo de otros productos geoteacutecnicos o de terrenos de granu-lometriacutea gruesa que quedaraacuten en parte retenidos entre sus huecos facilitando a la vez el paso de

la vegetacioacuten nacida o sembrada sobre eacutel mejo-rando de esta manera la implantacioacuten vegetal En particular las redes orgaacutenicas de coco tienen una gran adaptabilidad y flexibilidad generando bue-nos resultados en desmontes de margas arcillas etc poco pedregosos Como todos los soportes estas redes pueden ser instaladas fuera de eacutepocas de siembra de forma que se inicie la proteccioacuten superficial de los taludes antes del establecimien-to vegetal

6 Estabilizacioacuten y revegetacioacuten de taludes mediante sistemas flexibles

Se trata de una combinacioacuten de las teacutecnicas an-teriormente descritas geomallas tridimensionales mantas o redes con mallas de triple torsioacuten red de cable cable de refuerzo y bulones Esta com-binacioacuten se emplea cuando una teacutecnica individual no es capaz de solucionar todos los problemas de erosioacuten y estabilizacioacuten por siacute misma Gracias a sus caracteriacutesticas permite reunir las condicio-nes adecuadas para una posterior revegetacioacuten e integracioacuten visual del talud sustituyendo teacutecnicas maacutes agresivas como muros escolleras o gunita-dos

7 Muros de pie

Son elementos estructurales de la obra necesarios para lograr la estabilidad de los taludes Permiten disminuir la pendiente de los taludes hasta alcan-zar el equilibrio estaacutetico disminuyendo la veloci-dad de escorrentiacutea del agua de lluvia y facilitando la restauracioacuten vegetal Estos muros pueden ser ejecutados a base de gaviones metaacutelicos de mam-posteriacutea de escolleras de tierra reforzada (muros verdes) o de estructuras de madera Requieren un caacutelculo estructural previo Se pueden emplear en taludes muy verticales o que presenten alguacuten pro-blema de estabilidad o de falta de espacio para su ejecucioacuten (Figura 4) Presentan la ventaja de que al disminuir la altura de caiacuteda libre de las tierras pueden servir de soporte de estas presentando mejores posibilidades de revegetacioacuten y estabi-lizacioacuten del talud Es conveniente utilizarlos en combinacioacuten con geotextiles o mantas orgaacutenicas para evitar la peacuterdida de suelo a traveacutes del muro y facilitar el drenaje

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Figura 4 Muro vegetal de acondicionamiento de acceso a Fornes Granada

8 Fajinas o fajinados

Pueden ser prefabricados industriales a base de fi-bras naturales constituyendo lo que se han venido a llamar biorrollos Pero tambieacuten pueden ser fabrica-dos in situ de forma tradicional a base de manojos de ramas o tallos atados en forma de huso que se colocan sobre bermas o zanjas poco profundas Los biorrollos son estructuras prefabricadas de forma industrial perfectamente ciliacutendricas Se elaboran a base de fibras generalmente naturales (coco espar-to o paja) envueltas en mallas o redes de coco o de polipropileno Tienen la ventaja de su maleabilidad que les permite adaptarse a las irregularidades del terreno como caacutercavas Tienen una elevada capaci-dad para retener finos y semillas arrastradas y faci-lidad de suministro e instalacioacuten

Respecto a las fajinas elaboradas en el tajo median-te materiales locales las fajinas comerciales evitan la necesidad de desbroce o poda y el tiempo y es-fuerzo dedicados a ello Las fajinas de madera o ramas se han usado desde antiguo para el control de la erosioacuten Para ello se suelen emplear tallos de ramas lentildeosas con gran capacidad de enraizamiento que deben ser flexibles largas rectas y con yemas de crecimiento activas que se disponen paralelas al perfil del talud y se entierran someramente (veacuteanse imaacutegenes de ejemplo en httpwwwwsdotwagov Mataix 2003) El uso de estas fajinas vivas solo tie-ne sentido en lugares donde la humedad del suelo permite el enraizamiento En situaciones de sequiacutea o escasa disponibilidad de material se pueden em-plear restos de poda de aacuterboles cercanos (Soliveres et al 2008)

Este tratamiento da buenos resultados a medio-largo plazo siendo necesaria la aplicacioacuten de otras teacutecni-cas (hidrosiembras mantas orgaacutenicas etc) para re-ducir la erosioacuten a maacutes corto plazo al objeto de com-pletar el tratamiento recubriendo el espacio existente entre fajinas Estas estructuras estaacuten disentildeadas para controlar la erosioacuten derivada del flujo laminar de agua en cauces y reducir la escorrentiacutea superficial en taludes soportando velocidades de agua superiores a 15 ms-1 Esta teacutecnica ha sido recomendada para la creacioacuten de franjas donde implantar vegetacioacuten en las orillas de cauces de riacuteos crear lsquobioislasrsquo y reve-getar zonas pantanosas (Lewis 1999) Su colocacioacuten a lo largo de la orilla es raacutepida y sencilla fijaacutendose habitualmente mediante estacas de madera Las fa-jinas ademaacutes contribuyen a mejorar el eacutexito de las plantaciones de lentildeosas en taludes de pendientes de menos de 35deg ya que a) fraccionan los taludes (ha-bitualmente cada 8 o 15 m) de manera que atenuacutean los problemas de arrastre y escorrentiacuteas fuertes b) actuacutean como drenajes intermedios reduciendo la for-macioacuten de regueros y caacutercavas y c) crean un micro-clima benigno para el crecimiento de la vegetacioacuten (Ludwig y Tongway 1996 Tongway y Ludwig 1996 Mataix 2003)

9 Lechos y entramados de ramas colchones de vegetacioacuten

Son estructuras que pueden ser tambieacuten fabrica-das in situ o industrialmente para colocarlas sobre lechos de cauces de riacuteos y arroyos Casi siempre se situacutean por encima de las fajinas y unidas a es-tas forman un conjunto entramado y cosido hasta formar un lecho naturalizado y estabilizado por la vegetacioacuten Para la confeccioacuten de los lechos y en-tramados de ramas es necesaria una gran cantidad de material vegetal seleccionado preferentemente vivo (en verde) que puede resultar de los trabajos de desbroce o limpieza de los cauces valorizando con ello la biomasa forestal Estas estructuras de ramas actuariacutean como un mulch evitando la erosioacuten laminar y la formacioacuten de regueros Estas estructuras ganan estabilidad si se logra el enraizamiento para lo cual es necesario que el material vegetal a) se conserve fresco b) esteacute en condiciones fenoloacutegicas favorables c) pueda cubrirse al menos parcialmen-te con tierra y d) el suelo tenga un nivel de hume-dad adecuado

Los colchones prefabricados industrialmente al igual que los biorrollos estaacuten constituidos por una malla natural o sinteacutetica generalmente de coco o polipro-pileno rellena de fibras de coco esparto o paja para

formar una estructura plana de no maacutes de 10 cm de espesor Dispuesta sobre las maacutergenes de los cauces o cosida a los biorrollos es capaz de retener la ero-sioacuten laminar o en regueros capturando finos y semi-llas y permitiendo el crecimiento vegetal hasta gene-rar un conjunto estable Estos colchones puede ser precultivados en vivero con las especies adecuadas mejorando con ello su capacidad de estabilizar de forma inmediata estas maacutergenes evitando los riesgos de arrastres por falta de implantacioacuten vegetal

10 Encachados

Son estructuras muy resistentes a las fuerzas tanto internas como externas recurrentes sobre el terre-no que se construyen al objeto de dar seguridad a los taludes y a las maacutergenes de los cauces resul-tantes de la obra Se suelen instalar sobre puntos singulares que requieren especial atencioacuten como estribos puentes pasos superiores o inferiores etc Se pueden realizar a base de mamposteriacutea trabada escolleras piezas prefabricadas en hormigoacuten y cada vez con mayor frecuencia gaviones o colchones de revestimiento ya sean riacutegidos o flexibles (Figura 5) Estos uacuteltimos los gaviones de revestimiento tienen la ventaja de presentar mayor elasticidad estructural

y su permeabilidad a la vegetacioacuten con lo que su integracioacuten paisajiacutestica es siempre posible Ademaacutes si son flexibles seraacuten especialmente recomendables en situaciones en que las tensiones de empuje y arrastre de los cauces en las entradas o salidas de las obras de faacutebrica provoquen el socavamiento ro-tura y arrastre de las estructuras maacutes riacutegidas

Figura 5 Gavionado flexible como refuerzo de la salida de un paso inferior Jabalquinto Jaeacuten

III TEacuteCNICAS DESTINADAS A INCREMENTAR LA FERTILIDAD DEL SUELO

Con frecuencia los taludes de las infraestructuras via-les son poco feacutertiles hasta el punto de que su escasa fertilidad puede dificultar la colonizacioacuten vegetal natu-ral o promovida a traveacutes de hidrosiembras y plantacio-nes Por ello el incremento de la fertilidad del suelo mediante enmiendas orgaacutenicas y fertilizantes inorgaacuteni-cos es recomendable (Valdecantos et al 2004)

1 Fertilizantes inorgaacutenicos

Los fertilizantes inorgaacutenicos utilizados maacutes frecuen-temente son de liberacioacuten lenta Estos fertilizantes son sencillos de aplicar aportan las dosis necesarias de nitroacutegeno foacutesforo y potasio nutrientes particu-larmente importantes para el desarrollo vegetal y normalmente implican el aporte de cantidades ni-mias de elementos que pudieran ser perjudiciales o contaminantes Estos fertilizantes sin embargo son faacutecilmente lavables por lo que deberiacutean ser incorpo-rados en el sustrato para facilitar su acceso y evitar la exportacioacuten por escorrentiacutea y viento evitando asiacute

su desplazamiento antes de que se produzca el esta-blecimiento y crecimiento de las especies herbaacuteceas o lentildeosas Teniendo en cuenta sus resultados y la elevada disponibilidad de enmiendas orgaacutenicas los fertilizantes inorgaacutenicos suelen emplearse exclusiva-mente como complemento a otras teacutecnicas como las hidrosiembras

2 Enmiendas orgaacutenicas

Las enmiendas orgaacutenicas tienen la ventaja de que ademaacutes de aportar nutrientes baacutesicos para las plan-tas incrementan la cantidad de materia orgaacutenica del suelo y con ello mejoran otras propiedades fiacutesico-quiacutemicas del sustrato Suelen incrementar la capacidad de retencioacuten de agua del suelo de parti-cular importancia en medios mediterraacuteneos aunque esto dependeraacute del tipo de enmienda orgaacutenica y el clima donde se aplica pudiendo llegar a darse el efecto contrario (Fuentes et al 2007) Otra venta-ja del uso de estas enmiendas es que permite la

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reutilizacioacuten de restos orgaacutenicos (residuos soacutelidos urbanos residuos procedentes de ganaderiacutea y lodos de depuradora Cortina y Vallejo 2004) Finalmen-te la incorporacioacuten de compuestos orgaacutenicos podriacutea contribuir a mejorar los resultados de otras interven-ciones ecotecnoloacutegicas como las mantas orgaacutenicas y las hidrosiembras (Fuentes et al 2002 veacutease tam-bieacuten un ejemplo de eacutexito en la descripcioacuten de las teacutecnicas de introduccioacuten de herbaacuteceas) De forma ideal las enmiendas orgaacutenicas deben ser mezcla-das con la capa maacutes superficial (aproximadamente los primeros 50 cm) del sustrato original de esta

forma evitaremos problemas de erosioacuten y de peacuterdida o lavado de la enmienda aportada reduciendo el contacto entre la planta y la enmienda

Antes de fertilizar debemos tener en cuenta que idealmente el porcentaje de materia orgaacutenica del sustrato deberiacutea estar cercano al 15 y la salinidad nunca deberiacutea superar los 4 ds m-1 Las Tablas 2 y 3 explican en detalle queacute variables y anaacutelisis de suelo deberiacuteamos considerar y queacute rangos de valores de-beremos tolerar a la hora de decidir si el suelo es uacutetil y si debemos corregir su fertilidad

Tabla 2 Propiedades fiacutesico-quiacutemicas cuyo control es recomendable para definir la calidad de un sustrato Se indican meacutetodos analiacuteticos para su determinacioacuten

VARIABLE GRADO DE IMPORTANCIA MEacuteTODO ANALIacuteTICO

Contenido de humedad

Granulometriacutea

Elementos gruesos

Textura (lt2 mm)

Densidad aparente

pH

Salinidad

Carbonatos

Materia orgaacutenica

Nitroacutegeno total

Foacutesforo asimilable

Potasio asimilable

Metales pesados

++

++

++

++

++

++

++

+

+

+

++()

Tamizado

Tamizado y sedimentacioacuten

Cubicajea

Suspensioacuten acuosa 125

CE extracto en pasta saturada

Calciacutemetro Bernard

Walkley amp Black

Kjeldahl

Olsen

Extraccioacuten en acetato amoacutenico

Tratamiento aacutecido

Los signos positivos (+) indican grado de importancia de cada indicador de calidad + aconsejable ++ necesario +++ imprescindible () uacutenicamente importante en enmiendas orgaacutenicas o tierras de procedencia desconocida a Es necesario medirlo en grandes voluacutemenes CE conductividad eleacutectrica Modificado de Jorba y Vallejo 2008

Tabla 3 Niveles recomendados de diversas propiedades fiacutesico-quiacutemicas de los substratos aptos para la restauracioacuten y liacutemites legales para su aplicacioacuten

SUELO COMPOST FANGOS EDAR

MIacuteNIMO MAacuteXIMO

Granulometriacutea ()

250-75 mm - 25 - -

75-2 mm - 75 - -

lt2 mm 20 - - -

lt0002 mm 5 - - -

Textura Clases francas - -

Densidad aparente (Tasm3) - 18 06-08 (d) 1 (d)

Carbonatos totales () - 60 -- -

pH (125) 55 87 - 55-9

MO 08 - 10 gt35 lt80

Grado de estabilidad MO ( MO seca)

- - gt35 (d) gt30 (d)

Nitroacutegeno total () 005 03 - -

Foacutesforo asimilable (mgkg) 10 50 - -

Potasio asimilable (mgkg) 50 - - -

Salinidad CE (dSm a 25 ordmC) - 4 - -

Humedad () - - 30-40 lt80

CN - - lt20 -

Cadmio (mgkg) - 15 3 10 40

Cobre (mgkg) - 100 400 1000 1750

Niacutequel (mgkg) - 70 100 300 400

Plomo (mgkg) - 100 200 750 1200

Zinc (mgkg) - 200 1000 2500 4000

Mercurio (mgkg) - 1 25 10 25

Cromo (mgkg) - 100 300 1000 1500

Modificado de Valdecantos et al 2004 Jorba y Vallejo 2008 CE conductividad eleacutectrica MO materia orgaacutenica

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IacuteNDICE

Sin embargo las enmiendas orgaacutenicas presentan al-gunos problemas

bull La maquinaria normalmente utilizada para mez-clar estas enmiendas orgaacutenicas con el suelo no permite trabajar en pendientes elevadas hacien-do imposible trabajar en taludes con pendientes muy elevadas aunque esto dependeraacute del ran-go de actuacioacuten de la maquinaria disponible No obstante existe la posibilidad de mezclarlas en pilas junto con el sustrato antes del esparcimien-to de este por el talud o bien aplicarlas mediante hidrosembradora directamente sobre la superficie del talud De esta forma aumentaremos el rango de pendientes en el que estas enmiendas orgaacuteni-cas seriacutean aplicables

bull Pueden aumentar la salinidad del suelo en cli-mas secos originando problemas de toxicidad y reduciendo asiacute el crecimiento vegetal Este factor es particularmente relevante en medios medite-rraacuteneos en los que la sequiacutea estival intensifica el efecto de las sales Para evitar estos problemas se recomienda una dosis media de aproximada-mente 4 kg de enmienda orgaacutenica por m2 (Fuen-tes et al en prensa) si bien esta dosis maacutexima dependeraacute de la fertilidad del sustrato las condi-ciones climaacuteticas y el tipo de enmienda orgaacutenica utilizada A continuacioacuten se resumen los caacutelculos para estimar la cantidad de enmienda necesaria para llevar el suelo a un contenido de materia orgaacutenica de aproximadamente 15 (valor reco-mendado)

Si X = peso de compost respecto al total () A = concentracioacuten de materia orgaacutenica del subs-trato original () y Bm = concentracioacuten de ma-teria orgaacutenica de la enmienda orgaacutenica ( veacutea-se Tabla 3)

[A times (X - 100)] + [B times X] = 15

bull Debemos tener muy en consideracioacuten los conte-nidos en metales pesados de estas enmiendas ya que en muchas ocasiones las elevadas con-centraciones de zinc (Zn) cobre (Cu) y cadmio (Cd) pueden originar problemas graves de con-taminacioacuten y toxicidad del suelo (Tabla 3)Tam-bieacuten deberemos asegurarnos de que la enmien-da que apliquemos cumpla la legalidad vigente en cuanto a otras variables importantes como contenido de contaminantes orgaacutenicos y micro-organismos patoacutegenos

3 La aplicacioacuten de fertilizantes de forma heterogeacutenea es maacutes recomendable que hacerlo de forma homogeacutenea en todo el talud

Las especies vegetales difieren en sus estrategias ecoloacutegicas Esto es hay especies adaptadas a crecer en sustratos poco feacutertiles pero que no toleran la competencia con otras especies y otras que nece-sitan sustratos maacutes feacutertiles pero que gracias a sus mayores tasas de crecimiento o a su mayor habilidad para capturar los recursos disponibles son superio-res competitivamente pudiendo desplazar a otras especies en ambientes favorables El incremento de la fertilidad del suelo siempre va a favorecer a las especies competitivas En el caso de que sea el objetivo de la restauracioacuten el asegurar una maacutexima biomasa y cobertura vegetal fertilizar de forma ho-mogeacutenea seraacute la estrategia maacutes recomendable Sin embargo en ocasiones es deseable conseguir co-munidades vegetales diversas Para conseguir este objetivo debemos promover la estructura heterogeacute-nea de los ecosistemas naturales donde zonas con un elevado nivel de nutrientes estaacuten dispersas en una matriz de suelo maacutes pobre En la praacutectica para conseguir este objetivo bastaraacute con aplicar de forma heterogeacutenea (pe en bandas o manchas) cualquier medida ecotecnoloacutegica para aumentar la fertilidad Para facilitar el eacutexito de esta medida podemos uti-lizar esta aplicacioacuten heterogeacutenea en conjunto con una plantacioacutensiembra selectiva de especies con-centrando las especies pioneras en las partes no fertilizadas y las especies maacutes competitivas en zo-nas maacutes feacutertiles (Booth et al 1999) De esta forma podemos compatibilizar dos objetivos de la restau-racioacuten ecoloacutegica de los taludes de carretera esto es reducir la erosioacuten (la biomasa que crezca en la zonas maacutes fertilizadas deberiacutea ser suficiente para ello) y una mayor diversidad y aceleracioacuten de la sucesioacuten secundaria (quedaraacuten huecos libres para la llegada de nuevas especies) la aplicacioacuten heterogeacutenea de este tipo de teacutecnicas supondriacutea ademaacutes una reduc-cioacuten de costes

4 Una mayor fertilidad del suelo no siempre es positiva

Como se discute en el apartado siguiente relativo a la introduccioacuten de especies herbaacuteceas la inclusioacuten de especies de crecimiento raacutepido no siempre es recomendable ya que pueden obstaculizar la lle-gada y establecimiento de otras especies reducir la diversidad y frenar la sucesioacuten secundaria (Ma-tesanz et al 2008 Garciacutea-Palacios et al 2010)

Ademaacutes pueden conllevar la introduccioacuten de es-pecies invasoras tanto en los taludes restaurados como en las zonas cercanas generando problemas ambientales graves (Constaacuten-Nava et al 2007 Ma-tesanz et al 2008) En algunos taludes podemos encontrar suelos feacutertiles y adecuados para el cre-cimiento vegetal donde la fertilizacioacuten no es ne-cesaria Sin embargo estos taludes son sistemas proclives a albergar especies agresivas o incluso invasoras capaces de explotar al maacuteximo los re-cursos disponibles reduciendo la presencia de las demaacutes especies Esto reduce la diversidad bioloacutegi-ca de los herbazales de talud y nos aleja del ob-jetivo final de la restauracioacuten por lo que en estos casos la reduccioacuten de la fertilidad del suelo pue-de ayudarnos a reducir la presencia de especies indeseables Esta reduccioacuten de los nutrientes del suelo restaraacute habilidad competitiva a las especies agresivas permitiendo la presencia de un mayor nuacutemero de especies La medida mejor estudiada y maacutes efectiva para reducir la fertilidad del suelo es la fertilizacioacuten con carbono (ya sea azuacutecar serriacuten paja de cereal residuos de papel restos de poda

triturados etc Podeacuteis dirigiros al Capiacutetulo 4 para maacutes informacioacuten) Esta teacutecnica permite aumentar la relacioacuten entre carbono y nitroacutegeno del suelo haciendo maacutes difiacutecil para las plantas la asimilacioacuten de nitroacutegeno elemento esencial para su crecimien-to Con esta medida se puede reducir la dominan-cia de estas especies agresivas adaptadas a ob-tener de una forma maacutes raacutepida y eficaz que otras especies este nutriente del suelo Aunque desco-nocemos si ha sido probada en la restauracioacuten de taludes espantildeoles esta teacutecnica ha funcionado con eacutexito en la restauracioacuten de otros sistemas medite-rraacuteneos en California (Gillespie y Allen 2008) y en herbazales donde la fertilizacioacuten con carbono re-dujo en un 54 (Minnesota) y en un 62 (Ohio) la biomasa de especies invasoras (Bluementhal et al 2003 Averett et al 2004) El uso del material rico en carbono aplicado deberaacute estar sujeto a la cer-caniacutea de los diversos materiales anteriormente ci-tados para evitar el encarecimiento de esta medi-da y debe ser aplicada uacutenicamente en lugares con sustratos ricos donde la amenaza de dispersioacuten de estas especies invasoras o agresivas sea elevada

IV TEacuteCNICAS DESTINADAS A MEJORAR LA LLEGADA Y ESTABLECIMIENTO DE HERBAacuteCEAS (HIDROSIEMBRAS)

La introduccioacuten de especies herbaacuteceas es una de las teacutecnicas maacutes populares para la restauracioacuten de talu-des de infraestructuras lineales debido a su poten-cial capacidad para proteger el suelo a corto plazo El objetivo principal de estas teacutecnicas es aumentar raacutepidamente la cubierta vegetal a traveacutes de la siem-bra de especies vegetales de raacutepido crecimiento que deben dar paso maacutes adelante a especies peren-nes y lentildeosas tiacutepicas de etapas sucesionales maacutes avanzadas

La teacutecnica maacutes empleada para acelerar el estable-cimiento de esta cubierta herbaacutecea es la hidro-siembra Con frecuencia esta teacutecnica constituye el mayor porcentaje del presupuesto dedicado a las medidas preventivas Esta teacutecnica consiste en la proyeccioacuten sobre el terreno de una mezcla acuosa de semillas mulch fertilizantes y sustancias ad-herentes (Tabla 4) Es una teacutecnica de faacutecil aplica-cioacuten a gran escala porque se realiza con medios mecaacutenicos especializados dotados de equipos de

bombeo (Figura 6) Las siembras muestran las si-guientes ventajas

bull La vegetacioacuten se establece un 20-25 maacutes raacutepi-do que con cualquier otra alternativa mecaacutenica o siembra manual

bull El mulch de fibras vegetales del que se acompa-ntildea la hidrosiembra genera condiciones favorables para una raacutepida germinacioacuten

bull Se pueden alcanzar taludes difiacutecilmente accesi-bles

En el Capiacutetulo 5 de este manual se puede encon-trar informacioacuten detallada sobre algunas especies de hierbas que pueden funcionar en algunas zo-nas del sur sudeste y centro peninsular Ademaacutes se facilita una clave dicotoacutemica donde se describe bajo queacute condiciones es maacutes recomendable el uso de esta teacutecnica

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IacuteNDICE

La hidrosiembra es una teacutecnica muy extendida para revegetar taludes de infraestructuras lineales A con-tinuacioacuten se muestran una serie de especies que ha-bitualmente forman parte de los coacutecteles de semillas que se aplican mediante esta teacutecnica En la paacutegina de la izquierda alfalfa (Medicago sativa) sobre es-tas liacuteneas de izquierda a derecha y de arriba abajo pipirigallo (Onobrychis viciifolia) Agropyron crista-tum subsp pectinatum dactilo (Dactylis glomerata) y cantildeuela (Festuca arundinacea) Cabe destacar que solo las dos uacuteltimas especies son autoacutectonas de la flora peninsular Autor Ignacio Mola

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IacuteNDICE

Tabla 4 Ejemplo de composicioacuten caracteriacutestica de una hidrosiembra comercial

ESPECIES AUTOacuteCTONAS

ESTABILIZADOR ABONO MULCH TIPO DE MULCH AGUAAacuteCIDOS

HUacuteMICOS

300 kg de semillasha

20 kgha (aunque variacutea mucho en funcioacuten del tipo de producto)

400 kgha2000 kgha

Fibra corta de madera heno y alfalfa

2000 lha

100-150 kgha

Figura 6 Hidrosiembra de un talud de desmonte desde un camioacuten con moto-bomba (Foto Mariacutea Altamirano-OHL)

V INTRODUCCIOacuteN Y ESTABLECIMIENTO DE ESPECIES LENtildeOSAS

Como se ha mencionado con anterioridad (Capiacutetulo 6) la introduccioacuten de especies lentildeosas tiene gran intereacutes en la restauracioacuten ecoloacutegica La cubierta de lentildeosas puede acelerar la sucesioacuten secundaria requiere esca-so mantenimiento (disminuye la frecuencia de siegas)

mejora la integracioacuten paisajiacutestica y garantiza ciertas funciones asociadas a las plantas herbaacuteceas La Tabla 5 enumera las principales alternativas ecotecnoloacutegicas y los materiales lentildeosos vivos que se adecuan a cada una de ellas

Tabla 5 Teacutecnicas constructivas de ingenieriacutea natural y materiales lentildeosos adecuados para su implementacioacuten (adaptado de Schluumlter 1986)

MATERIAL LENtildeOSO VIVO

SISTEMAS CONSTRUCTIVOS SIMPLES

SISTEMAS CONSTRUCTIVOS COMBINADOS

Varas

Cubierta de ramas

Fajinas

Trenzados o empalizadas

Tallos y ramas

Fajinas de vegetacioacuten

Drenaje vegetado

Fajinas

Trenzados o empalizadas

Gradas de vegetacioacuten (Enrejados)

Gaviones vegetados

Muros tipo lsquoCribwallrsquo y otros muros de soporte (entramados)

Muros de piedra seca

Escolleras

Tierra armada

Estacas Estaquillado

Raiacuteces Tocones enraizados viables

Plantas enraizadasEstablecimiento de lentildeosas

Fajinas de vegetacioacuten

Semillas Siembras

Los meacutetodos de establecimiento de la vegetacioacuten son muy variados En este capiacutetulo los clasificamos en tres grandes grupos

bull Establecimiento de la vegetacioacuten sin apoyo de estructuras artificiales

bull Establecimiento de la vegetacioacuten con apoyo de estas (teacutecnicas combinadas)

bull Teacutecnicas complementarias

1 Establecimiento de la vegetacioacuten sin apoyo de estructuras artificiales

Se pueden establecer dos grupos

bull Teacutecnicas de cobertura destinadas a evitar la erosioacuten superficial mediante el incremento raacute-pido de la vegetacioacuten se discuten ampliamente en el apartado dedicado a la erosioacuten de este mismo capiacutetulo

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IacuteNDICE

bull Teacutecnicas de estabilizacioacuten permiten estabilizar el terreno hasta un maacuteximo de 2 m de profun-didad aproximadamente utilizando plantas lentildeosas obtenidas por reproduccioacuten vegetativa colocadas en filas horizontales Las plantas de-ben ser capaces de emitir raiacuteces adventicias de modo que puedan originar un entramado que permita la fijacioacuten y estabilizacioacuten del terreno Estas teacutecnicas son de muy difiacutecil dimensiona-miento desde el punto de vista de los paraacute-metros mecaacutenicos por lo que es recomendable cierta experiencia para que cumplan su objetivo de forma satisfactoria

Este conjunto de teacutecnicas se aplica uacutenicamente cuando existe una garantiacutea de que durante su desa-rrollo no se produciraacuten perturbaciones que puedan generar riesgos inaceptables o cuando estos riesgos no justifiquen la utilizacioacuten de meacutetodos de estabili-zacioacuten maacutes costosos

a Estaquillados

Consisten en la utilizacioacuten de trozos de ramas verdes hincadas en el suelo Las ramas de varios antildeos deben estar sanas mostrar una con corteza fina sin ramas laterales y sin estriacuteas y deben tener una longitud media de 40-100 cm y un diaacutemetro de 2-8 cm Deben estar afiladas por un extremo para facilitar su insercioacuten hasta que apenas 5 cm emerjan de la superficie Es muy importante que la longitud sea suficiente para llegar hasta el nivel freaacutetico u horizontes edaacuteficos con suficiente hume-dad durante el verano

Esta teacutecnica permite la introduccioacuten sencilla y raacutepi-da de un gran nuacutemero de plantas que aseguraraacute a medio-largo plazo una cobertura y una estructuracioacuten radicular densa de los taludes Puede tambieacuten incluir-se en esta teacutecnica la utilizacioacuten de estacas de sauce de 2-3 m de longitud para seguridad y anclaje de los taludes de maacutergenes de riacuteos Esta teacutecnica estaacute especialmente recomendada para reparar pequentildeos deslizamientos y asentamientos debidos al exceso de humedad del suelo en lugares sin problemas gra-ves de estabilidad Tambieacuten se emplea como fijacioacuten de otros elementos de control de la erosioacuten como los geotextiles las mantas orgaacutenicas etc Tambieacuten ayuda al control de la erosioacuten permitiendo la esta-bilizacioacuten de taludes sometidos a la erosioacuten fluvial Cuando las estaquillas se han desarrollado la cubier-ta vegetal contribuye a estabilizar el talud y si las especies introducidas no son agresivas o demasiado competitivas con otras especies pueden favorecer la colonizacioacuten por otras especies del entorno Los es-taquillados se adaptan muy bien a la instalacioacuten de vegetacioacuten en escolleras por permitir una instalacioacuten posterior a la construccioacuten de la escollera aseguran-do de este modo su revegetacioacuten sin necesidad de intervenciones aparatosas o caras Solo es necesario abrir agujeros donde se introduce suelo y se clava la estaquilla garantizando que esta quede clavada en el suelo subyacente a la escollera (Figura 7)

Importa auacuten referir el intereacutes de la utilizacioacuten de esta-quillas para fines estructurales y funcionales como en empalizadas de retencioacuten de escorrentiacutea en caacutercavas (Figura 6) en cepillos o peines vivos de reconstruc-cioacuten de orillas erosionadas o en cunetas de drenaje

Figura 7 Estaquillados en escolleras (adaptado de Florineth 2004)

Estaquilla de sauce 03 - 8 cm

Paja como proteccioacuten contra el arrastre de suelo

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IacuteNDICE

b Empalizada trenzada viva

Constituye junto con las fajinas la teacutecnica de maacutes diversa utilizacioacuten desde la antiguumledad Puede ser utilizada en la proteccioacuten de orillas fluviales y en la estructuracioacuten y consolidacioacuten de taludes Es tambieacuten

una teacutecnica de ejecucioacuten sencilla que consiste en la realizacioacuten de un trenzado de ramas vivas de sauce (u otras especies adecuadas a la ecologiacutea y condiciones del lugar) que se anclaraacuten al suelo mediante estacas (que pueden ser vivas) o pique-tas (Figura 8)

Figura 8 Empalizadas trenzadas vivas en la orilla de un rio (taller AEIP Orense 2008 taller Ripidurable Alpiarccedila 2007 adaptado de Florineth 2004)

Trenzado de orilla fluvial

Trenzado diagonal

Ramas de sauce trenzadas en la direccioacuten de la escorrentiacutea y con la base insertada en la orilla Ramas de sauce 3-10 cm

Trenzado horizontal

Direccioacuten de la escorrentiacutea

Estaquilla de soporte 0 12-15 cm

0

Esta teacutecnica es muy uacutetil para la proteccioacuten de orillas de riacuteos donde la velocidad maacutexima del agua sea inferior a 35 ms (hay autores que indican un liacutemite mucho maacutes bajo alrededor de 15 ms) Tambieacuten se suelen utilizar en taludes para la estructuracioacuten de la capa superficial del suelo (hasta unos 20 cm de profundidad) Esta utilizacioacuten presenta limitaciones debido a la necesidad de una elevada humedad que garantice el desarrollo vegetativo del material utilizado Como alternativa podemos utilizar mate-rial muerto para apoyar el eacutexito de plantaciones de ejemplares ya enraizados (veacutease tambieacuten el aparta-do de este capiacutetulo dedicado a las fajinas) En talu-des hay diversos modos de instalacioacuten siendo los principales las empalizadas en diagonal (Figura 9) y las empalizadas horizontales sencillas

Figura 9 Empalizada trenzada en diagonal en la consolidacioacuten de taludes

c Cobertura o estera de ramaje

Esta teacutecnica es particularmente adecuada para aumen-tar la cobertura y promover la consolidacioacuten de orillas de riacuteos donde se registra torrencialidad y velocidades muy elevadas (tensiones de arrastre superiores a 200 Nm2) Consiste en recubrir el talud con una capa de ramas de varios metros de longitud disponiendo el extremo maacutes grueso bajo el nivel del agua y la parte ramificada en la zona superior de los taludes (Figura 10) Se fijan utilizando piquetas o estacas dispuestas

en diagonal a intervalos de 15 m A estas estacas se fija un alambre grueso que se tensa al clavar las estacas presionando las ramas contra el suelo La base es a continuacioacuten consolidada con piedras en escollera (para riacuteos de elevado caudal y velocidad) o bien con fajinas o troncos de madera en riacuteos maacutes tranquilos Toda la estructura es finalmente cubier-ta con una ligera capa de suelo Su construccioacuten a pesar de ser relativamente sencilla exige cuidados particulares para garantizar su eficacia y resistencia al flujo del agua Las esteras protegen al talud de la accioacuten de la corriente y desarrollan con el tiempo una espesa franja de vegetacioacuten El rozamiento de la corriente con la estera reduce su velocidad y por consiguiente su energiacutea erosiva Las ramas detienen los materiales y sedimentos arrastrados con lo que se crea un colchoacuten protector que aiacutesla la orilla de la accioacuten directa del agua y del oleaje (Mataix 2003) No obstante es fundamental fijar bien estas esteras de ramaje al suelo ya que despueacutes de lluvias importan-tes estos materiales podriacutean ser arrastrados llegan-do a bloquear los conductos de desaguumle del talud y provocar problemas serios

Esta teacutecnica es muy exigente en material tiempo y mano de obra especializada (pe para la construc-cioacuten de la escollera es necesaria maquinaria pesa-da) por lo que solo debe ser utilizada en zonas don-de se debe garantizar una proteccioacuten inmediata y de elevada eficacia contra la erosioacuten fluvial Se adapta particularmente a la reconstruccioacuten de frentes de erosioacuten activos y a la proteccioacuten de infraestructuras como puentes y represas Hay que tener presente que esta teacutecnica solo se puede utilizar en orillas con una pendiente maacutexima de unos 30deg No se adapta a intervenciones en taludes no fluviales por su gran necesidad de agua

Figura 10 Fijacioacuten con alambres tensos (taller praacutectico Viena Austria)

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IacuteNDICE

d Lecho de ramajes

Este es un sistema claacutesico y muy eficaz de consoli-dacioacuten de taludes y pendientes Tiene la ventaja de asegurar inmediatamente una estructuracioacuten de la pendiente hasta una profundidad de 15 m aproxi-madamente Puede ser realizado mediante ramas de plantas susceptibles de crecer o en combinacioacuten con plantas enraizadas criadas en vivero Es apto para taludes de suelo desnudo y puede integrarse en muros armados de mantas orgaacutenicas La mayor limitacioacuten que presenta este meacutetodo es que son po-cas las plantas que tienen capacidad de desarrollo vegetativo en condiciones de baja humedad que suelen presentar los taludes y laderas en medios mediterraacuteneos En estos ambientes es recomendable utilizar solo planta cultivada en contenedor o en su defecto plantas a raiacutez desnuda (veacutease Capiacutetulo 6)

La construccioacuten de lechos de ramaje es muy senci-lla Se empieza por excavar una primera berma con

una contrapendiente superior de 5deg y una profun-didad entre 05-15 m (Figura 11) Se disponen en-seguida las ramas y eventualmente las plantas ya enraizadas (de longitud igual o superior a la pro-fundidad de la berma) de modo que cubran la ber-ma Las ramas deben sobresalir del terreno unos 10 cm para favorecer el rebrote Finalmente se abre una nueva berma 15-30 metros maacutes arriba utilizando el suelo extraiacutedo para rellenar la berma inferior este procedimiento se repite hasta culmi-nar la pendiente Estos lechos se adaptan tambieacuten a sistemas constructivos combinados como son los muros verdes armados de mantas orgaacutenicas donde se utilizan los lechos de ramajes entre las lsquoalmohadasrsquo o tongadas de suelo introducido (Fi-gura 11) Esta teacutecnica se adapta a la construccioacuten de muros verdes inclusive muros de proteccioacuten contra el ruido aunque no son nada recomenda-bles en medios secos ya que el establecimiento de plantones o estaquillas de este tamantildeo es muy difiacutecil en estos medios

Figura 11 Muro verde de tongadas de suelo introducido en mantas orgaacutenicas con lechos de ramaje entre las tongadas (Meran Austria to-mado de Florineth 2004)

2 Establecimiento de la vegetacioacuten con apoyo de estructuras artificiales (teacutecnicas combinadas)

El establecimiento espontaacuteneo de la vegetacioacuten en los taludes frecuentemente es muy difiacutecil cuando las condiciones ambientales son muy limitantes En estos casos es recomendable la utilizacioacuten de teacutec-nicas que realicen las funciones que la vegetacioacuten no puede hacer a corto y medio plazo a la vez que facilitan su establecimiento Estas intervenciones conjugan elementos vegetales con materiales inertes como madera acero galvanizado piedra u hormigoacuten

materiales que actuacutean como estabilizadores hasta que las plantas son capaces de realizar esta funcioacuten

Existen dos tipos de estructuras combinadas a) las estructuras de soporte que se destinan a estabilizar una masa de tierra muy inestable en profundidad (equiparables en teacuterminos geoteacutecnicos a muros de soporte) y b) las estructuras de cobertura y con-solidacioacuten destinadas a estabilizar las capas maacutes superficiales del suelo (hasta 30 cm) La presencia de especies lentildeosas en estas estructuras es de im-portancia capital ya que garantizan su eficacia a medio-largo plazo El desarrollo de la vegetacioacuten

Tierra de relleno

Rocas

Ramas y varas capaces de desarrolllar raiacuteces

Manta orgaacutenica(700-800 gm2)

10

050

-08

0 m

150-200 m

y especialmente el crecimiento de raiacuteces resistentes y profundas proporciona cohesioacuten y anclaje a las distintas capas de suelo haciendo innecesarias las estructuras inertes de soporte

a Entramados vivos

Estas estructuras se adaptan muy bien al soporte de pendientes y a la proteccioacuten y reconstruccioacuten de orillas fluviales muy degradadas Tambieacuten pue-den servir en obras transversales de disipacioacuten de energiacutea en cauces torrenciales de montantildea Su construccioacuten se hace con troncos de diaacutemetro de

entre 10 y 40 cm en capas alternas presentado normalmente una pendiente estructural de unos 5-10deg (Figura 12) Su estructura puede ser sencilla es decir con solo una pared longitudinal frontal (Figura 13) o doble con dos paredes longitudi-nales (Figura 12) Puede ser anclado con estacas o piquetas en medios muy inestables en profun-didad Posteriormente se rellena con tierra y en cada nivel se distribuyen ramas con capacidad vegetativa o plantas con raiacuteces de modo que lle-guen al suelo de la base Pueden incluir rellenos de piedra en la base o estar asociados a drenaje en las aplicaciones en pendientes

Figura 12 Entramado vivo doble combinado con un enrejado vivo y un drenaje para el soporte y consolidacioacuten de una pendiente (tomado de Martinho 2005)

Estaquillados vivos de arbustos autoacutectonos

Tronco horizontal superficialOslash = 12-20 cmL = 1-5 m

Tronco horizontal bajo tierraOslash = 12-20 cmL = 1-5 m

Tronco de fijacioacuten al sustratoOslash = 8-10 cmL = 1 m

Tronco verticalOslash = 12-20 cmL = 1-5 m

Anclaje

Tradicionalmente la fijacioacuten de los palos trans-versales se ha hecho con clavos Actualmente se recomienda el sistema de lsquojunta tipo banderarsquo con el fin de minimizar heridas en el lentildeo con el consiguiente riesgo de invasioacuten de patoacutegenos En funcioacuten del medio del tipo de aplicacioacuten y de la intensidad de los factores de tensioacuten a que

estaraacuten sujetas asiacute se distinguen los procedimien-tos constructivos

- Obras fluviales

En estas obras debido a la accioacuten erosiva hay que garantizar que las aacutereas abiertas esteacuten protegidas

Geodreno

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IacuteNDICE

contra la erosioacuten por filtros de piedras fajinas o geotextil de modo que se garantice la integridad estructural de la construccioacuten

bull Longitudinales (proteccioacuten o reconstruccioacuten de orillas) este tipo de intervenciones debido a la permanente accioacuten erosiva del agua tienen que ser cerradas en la parte frontal con piedras y faji-nas de modo que impidan la erosioacuten del material de relleno La disposicioacuten relativa de los palos transversales (superpuestos o alternados) no es criacutetica puesto que las tensiones son longitudina-les (el flujo del agua del riacuteo)

bull Transversales utilizados normalmente como estructuras de retencioacuten torrencial estos entra-mados son normalmente rellenados con piedra pudiendo sin embargo incluir vegetacioacuten lentildeosa que pueda aumentar el efecto de retencioacuten del flujo hiacutedrico Esta vegetacioacuten estaraacute compuesta por raiacuteces o ramas con capacidad vegetativa

- Obras de consolidacioacuten y soporte en pendientes

En estas obras en las que las tensiones son trans-versales la estructura es criacutetica Esta debe repartir estas fuerzas transversales de la forma maacutes homo-geacutenea por lo que es criacutetica en este caso la distri-bucioacuten alternada de los troncos Esto es importante no solamente cuando los entramados son utilizados como muros de soporte sino tambieacuten cuando son utilizados como elemento estructural de soporte de una carretera donde la correcta distribucioacuten de car-gas es criacutetica Como el principal factor erosivo es la lluvia no hay necesidad de instalar filtros entre los troncos siendo suficiente respetar el aacutengulo de es-tabilidad del material de relleno para que la estruc-tura quede estabilizada despueacutes de la construccioacuten hacia el inicio del desarrollo de la vegetacioacuten

- Otros tipos de entramados

En situaciones donde las tensiones y las masas del suelo que se pretende sujetar no exigen estructuras tan comple-jas y caras como los entramados dobles pueden utilizar-se entramados sencillos de una sola pared entramados tipo Roma o entramados modulares tipo Latina (Figura 13)

Figura 13 Entramado sencillo de una pared (A tomado de Florineth 2004) entramado tipo lsquoRomarsquo (Paolo Cornellini B) y entramado tipo lsquoLatinarsquo (Paolo Cornelini y Sauli 2005 C y D)

Estaquilla de aceroOslash 10-20 cm

100-150 m

30-50

200

-25

0 m

A

B

C D

b Gaviones revegetados con ramas vivas

Los gaviones son estructuras conformadas por una malla de alambre prefabricada que es rellenada con piedras Para revegetar estos gaviones se les puede aportar una capa de tierra feacutertil introduciendo des-pueacutes ramas vivas o plantas enraizadas de longitud superior a la anchura del gavioacuten de modo que se ga-rantice un buen desarrollo de las raiacuteces Al enraizar y crecer estas plantas ayudaraacuten a fijar las estructuras al talud daacutendole estabilidad mejorando su integracioacuten paisajiacutestica y garantizando una estabilizacioacuten esen-cialmente natural (Figura 14) Se utilizan en la defensa longitudinal de orillas o para soporte y consolidacioacuten de taludes con pendientes muy elevadas o inestables

c Tierra armada (geotextiles reforzados con lechos de ramaje)

Para armar esta estructura se utilizan mallas de geo-textil que pueden estar reforzadas con mallas de ace-ro rellenadas con unos 50 cm de tierra vegetal Una vez construida la estructura se procede a la plantacioacuten de especies lentildeosas o a la instalacioacuten de un lecho de ramaje que mejoraraacuten la estabilidad de toda la es-tructura y aumentaraacuten la integracioacuten paisajiacutestica Se utiliza este tipo de intervenciones en la estabilizacioacuten

Figura 14 Gaviones revegetados esquema de su estructura (Florineth 2004) y procedimiento de construccioacuten

Estaquillas

Piedras dispuestas manualmente

10-15 cm

100 m

100

m

de taludes de pendiente media-alta en zonas de ribera o en la construccioacuten de muros de proteccioacuten sonora

d Enrejado vivo

Los enrejados vivos son estructuras de madera de consolidacioacuten superficial de taludes con una altura de unos 20 m y pendientes de 30deg aproximadamen-te Se destinan a consolidar las capas superiores de la pendiente hasta una profundidad de 30-40 cm (en funcioacuten del tipo de entramado) Se construyen

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utilizando troncos de diaacutemetros entre 10 y 30 cm en una estructura enrejada sencilla o doble (Figura 12) La distancia vertical entre los distintos niveles trans-versales es funcioacuten del aacutengulo de estabilidad del sue-lo y debe garantizar la ausencia de movimientos de suelo La introduccioacuten de la vegetacioacuten puede hacerse por plantacioacuten o estaquillado y puede ser posterior a la construccioacuten del enrejado Eso significa que es posible construir el enrejado fuera del periacuteodo vege-tativo a diferencia de lo que ocurre en la mayoriacutea de sistemas descritos

e Peldantildeos de lentildea

Esta es una teacutecnica sencilla de consolidacioacuten superfi-cial de suelos erosionados y de reduccioacuten de la energiacutea de la escorrentiacutea por reduccioacuten de la trayectoria lineal del agua a lo largo de la ladera Simultaacuteneamente constituyen un soporte magnifico para la instalacioacuten de vegetacioacuten por la acumulacioacuten de partiacuteculas finas y por la reduccioacuten de la erosividad en estos peldantildeos Su construccioacuten se hace clavando estacas a lo largo de la ladera por detraacutes de las cuales se disponen horizontal-mente uno o dos troncos Detraacutes de estos se pueden construir lechos de ramaje o realizar plantaciones de lentildeosas Facilitan tambieacuten el eacutexito de siembras entre las liacuteneas de peldantildeos al reducir la energiacutea de la esco-rrentiacutea y la consecuente erosioacuten

3 Teacutecnicas complementarias

Junto con las teacutecnicas constructivas propiamente dichas se puede emplear otras teacutecnicas que terminen y comple-menten las anteriores pero que no cumplan un objetivo de estabilizacioacuten o de proteccioacuten contra la erosioacuten Es el caso de la plantacioacuten de especies lentildeosas con el obje-tivo de acelerar el desarrollo de la sucesioacuten la creacioacuten de pantallas sonoras los drenajes etc Este conjunto de teacutecnicas se detallan en el Capiacutetulo 5 de este manual

VI OTRAS TEacuteCNICAS

No es el propoacutesito de este capiacutetulo discutir teacutecnicas que no tengan como objetivo final el reestablecimiento de una cubierta vegetal lo maacutes parecida a la original po-sible Sin embargo creemos importante que el lector sepa de la existencia de otras posibles medidas (no eco-tecnoloacutegicas) que pueden servir para aumentar la inte-gracioacuten paisajiacutestica en zonas donde es completamente imposible cualquier otro tipo de restauracioacuten ambiental El mejor ejemplo de esto son los productos de envejeci-miento para disimular taludes yo canteras de roca viva que no son colonizables por la vegetacioacuten Esta teacutecnica no forma parte de la restauracioacuten ecoloacutegica pero pue-de ser uacutetil en ocasiones concretas (pe en canteras de maacutermol donde la colonizacioacuten vegetal es enormemente difiacutecil en las paredes resultantes)

iquestNecesitamos realmente aplicar medidas ecotecnoloacutegicas

Depende del caso Sobre todo tenemos que fijarnos en la gravedad de los efectos de la obra sobre los distintos procesos ecoloacutegicos y en si estos se pue-den reestablecer de forma natural o no Tambieacuten son importantes las constricciones a las que nos pueden llevar los plazos de las diferentes administraciones

iquestQueacute procesos ecoloacutegicos estaacuten dantildeados

Es fundamental estudiar en detalle cuaacuteles son los pro-cesos ecoloacutegicos que se han dantildeado Por ejemplo si no tenemos preocupacioacuten acerca de las limitaciones a la dispersioacuten de las semillas de las especies vegetales de intereacutes no tiene sentido plantearse siembras

iquestQueacute materiales son faacuteciles de conseguir y cercanos

Para las semillas las plantas las fuentes de carbono las enmiendas orgaacutenicas y los distintos materiales

vegetales que se describen en este capiacutetulo debe-remos dar preferencia a los que son originarios de la zona y por tanto potencialmente maacutes adaptados a las condiciones locales

iquestCuaacutel es la medida maacutes adecuada para mi sitio concreto (pendiente tipo de suelo climahellip)

Esta es otra de las preguntas clave que tiene difiacutecil res-puesta En este capiacutetulo tratamos de enfatizar que no se deben copiar lsquorecetasrsquo directamente de proyectos de zonas con climas distintos sin la previa evaluacioacuten criacutetica de sus limitaciones en nuestra zona Tenemos que tener muy claras las teacutecnicas disponibles y cuaacutel es la maacutes barata eficaz y menos dantildeina de todas las posibles para nuestro caso concreto La breve des-cripcioacuten dada en este capiacutetulo y las fuentes de infor-macioacuten recomendadas ayudaraacuten al lector a decidir En este capiacutetulo ofrecemos un aacuterbol de decisiones (Figura 1) y una tabla-resumen sobre todas las teacutecnicas men-cionadas en este capiacutetulo los procesos que ayudan a reestablecer y su coste (Tabla 6) que esperemos que faciliten al lector la toma de esta difiacutecil decisioacuten

VII PREGUNTAS CLAVE

Tabla 6 Resumen de las teacutecnicas detalladas en este capiacutetulo los procesos que sirven para reestablecer las situaciones en las que son maacutes recomendables y una estima cualitativa de su coste

TEacuteCNICA CONTROL DE EROSIOacuteN

FERTILIDAD ESTABILIDAD INTRODUCCIOacuteN DE PLANTAS

DRENAJE SE RECOMIENDA EN

COSTE

lt02 M gt02 M

Mallas o enrejados metaacutelicos

Taludes con pendientes elevadas de roca fracturada o granulometriacutea gruesa

Medio

Geomallas volumeacutetricas

Taludes de pendientes elevadas (gt40ordm) con suelos pobres de desmonte mejora la retencioacuten de finos

Medio

Geoceldas

Canalizaciones y encauzamientos de barranco aplicar junto con hidrosiembra NO en taludes de pendiente 30ordm ni desmontes

Medio

Mantas orgaacutenicas

Control de erosioacuten laminar rellenado de regueros cunetas y caacutercavas revestimiento de muros soporte de trepadoras Frenan elementos finos Usar con fajinas o biorrollos o con mallas sinteacuteticas de gran duracioacuten

Mediobajo

Mallas o redes orgaacutenicas yo sinteacuteticas

Taludes verticales Utilizar junto con geotextiles Frena la erosioacuten por caacutercavas

Medio

Muros de pie

Reduce la erosioacuten en taludes muy verticales utilizar junto con geotextiles o mantas orgaacutenicas

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TEacuteCNICA CONTROL DE EROSIOacuteN

FERTILIDAD ESTABILIDAD INTRODUCCIOacuteN DE PLANTAS

DRENAJE SE RECOMIENDA EN

COSTE

lt02 M gt02 M

Fajinas o fajinados

Restauracioacuten de caacutercavas riberas o lugares huacutemedos (fajinas vivas) Frenan la erosioacuten en taludes no muy verticales (gt35ordm) Conviene aplicar con teacutecnicas a maacutes corto plazo (mantas orgaacutenicas hidrosiembras entramados de ramas)

Bajo

Lechos y entramados de ramas y colchones de vegetacioacuten

Aplicable sobre todo en lechos de riacuteos Tambieacuten para formar islas o como fitodepuradoras

Bajo

Encachados

Evitar socavamiento o arrastre de estructuras en lechos de riacuteo

Alto

Fertilizacioacuten inorgaacutenica

Aumenta fertilidad del suelo es maacutes recomendable la orgaacutenica si el material disponible es bueno

Bajo

Fertilizacioacuten orgaacutenica

Aumenta la materia orgaacutenica del suelo reduce la erosioacuten y mejora el establecimiento vegetal

Bajo

Fertilizacioacuten con carbono

Taludes con elevada fertilidad y donde hemos detectado presencia de especies muy dominantes o catalogadas como invasoras

Depende de la cercaniacutea de fuentes de carbono

Tabla 6 Resumen de las teacutecnicas detalladas en este capiacutetulo los procesos que sirven para reestablecer las situaciones en las que son maacutes recomendables y una estima cualitativa de su coste (Continuacioacuten)

TEacuteCNICA CONTROL DE EROSIOacuteN

FERTILIDAD ESTABILIDAD INTRODUCCIOacuteN DE PLANTAS

DRENAJE SE RECOMIENDA EN

COSTE

lt02 M gt02 M

Hidrosiembras

Taludes de difiacutecil acceso o con elevado riesgo de erosioacuten Utilizar conjuntamente con teacutecnicas que aumenten la fertilidad del suelo Veacutease Capiacutetulo 5 de este manual

Medio

Estaquillado

Lugares con alta disponibilidad hiacutedrica Muy recomendado para pequentildeos deslizamientos debidos al exceso de humedad del suelo o como fijacioacuten de geotextiles o mantas orgaacutenicas Revegetacioacuten de escolleras

Bajo

Empalizada trenzada viva

Proteccioacuten de orillas (velocidad maacutexima de 15-35 ms si supera esto mejor estera de ramaje) Estructuracioacuten de taludes (siempre y cuando haya bastante humedad edaacutefica

Alto

Estera de ramaje

Para lugares con riesgo fluvial muy elevado

Alto

Entramados vivos

Orillas de riacuteo muy degradadas consolidacioacuten de pendientes en sitios huacutemedos

Medio

Tabla 6 Resumen de las teacutecnicas detalladas en este capiacutetulo los procesos que sirven para reestablecer las situaciones en las que son maacutes recomendables y una estima cualitativa de su coste (Continuacioacuten)

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IacuteNDICE

TEacuteCNICA CONTROL DE EROSIOacuteN

FERTILIDAD ESTABILIDAD INTRODUCCIOacuteN DE PLANTAS

DRENAJE SE RECOMIENDA EN

COSTE

lt02 M gt02 M

Gaviones revegetados con ramas vivas

En proteccioacuten de orillas o para soporte y consolidacioacuten de taludes con pendientes muy elevadas o inestables

Medio

Tierra armada

Taludes de pendiente media-alta en zonas de ribera o en la construccioacuten de muros de proteccioacuten sonora

Alto

Enrejado vivo

Consolidacioacuten superficial de taludes con una altura de hacia 20 m y pendientes de lt30ordm

Alto

Peldantildeos de lentildea

Consolidacioacuten superficial de suelos erosionados y de reduccioacuten de la energiacutea de la escorrentiacutea

Bajo

Tabla 6 Resumen de las teacutecnicas detalladas en este capiacutetulo los procesos que sirven para reestablecer las situaciones en las que son maacutes recomendables y una estima cualitativa de su coste (Continuacioacuten)

iquestDoacutende

Autoviacutea A-30 en su variante de Molina del Segura Murcia (Figura 15)

iquestQueacute se hizo

Con el objetivo de evaluar la efectividad de las mantas orgaacutenicas en clima mediterraacuteneo se reali-zoacute un experimento para cuantificar la cantidad de soacutelidos arrastrados y niveles de supervivencia de plaacutentulas sobre taludes en terrapleacuten Para ello se aplicaron mantas orgaacutenicas a base de esparto y coco comprobando los niveles de erosioacuten del sue-lo y el crecimiento de los plantones introducidos La eficacia del tratamiento se valoroacute comparaacutendo-lo con un control con plantacioacuten e hidrosiembra pero sin ninguacuten tipo de manta orgaacutenica (Contreras y Navarro-Quercop 1996 para maacutes detalles)

iquestQue ocurrioacute

Las mantas orgaacutenicas fueron mucho maacutes eficaces que el control (Figura 16) Las peacuterdidas de suelo

en las parcelas protegidas con manta de esparto y de fibra de coco oscilaron entre 2 y 5 Tmha y antildeo mientras que en la parcela control el maacuteximo de peacuterdida fue de 148 Tmha y antildeo Ademaacutes de reducir la peacuterdida de suelo sobre todo la de la fraccioacuten de granulometriacutea maacutes gruesa las mantas orgaacutenicas tambieacuten incrementaron el desarrollo general de la plantacioacuten Las zonas sin las mantas mostraron un riesgo evidente de descalce y desaparicioacuten de las plantas por efecto de la peacuterdida de suelo

En la restauracioacuten de infraestructuras lineales con frecuencia aparecen problemas derivados de la au-sencia de una correcta evaluacioacuten de alternativas Cuando nos enfrentamos a la restauracioacuten ecoloacutegi-ca de infraestructuras lineales (o cualquier otro tipo de restauracioacuten) la primera alternativa que debe-mos barajar es no actuar dejando que los procesos naturales sigan su curso Alternativamente se pue-de corregir los procesos naturales necesarios para que la restauracioacuten ocurra de forma natural Solo si las anteriores alternativas no ofrecen garantiacuteas de eacutexito se debe acudir a la aplicacioacuten de las medidas de menor impacto y coste que permitan que estos procesos se reactiven Si se estima que ninguna de estas opciones permitiriacutea alcanzar los objetivos de la restauracioacuten se debe aplicar teacutecnicas de mayor impacto que sustituyan de forma temporal los pro-cesos ecoloacutegicos interrumpidos Normalmente las teacutecnicas ecotecnoloacutegicas deberiacutean ser aplicables soacutelo cuando la primera y la segunda alternativas

no son a priori viables Seraacute el gestor de la obra quien tenga que decidir las medidas maacutes indicadas para cada situacioacuten Ademaacutes de los condicionantes puramente ecoloacutegicos esta decisioacuten dependeraacute del riesgo inminente de erosioacuten y de la presioacuten social y poliacutetica para conseguir una integracioacuten paisajiacutesti-ca en el menor tiempo posible La Figura 1 muestra las alternativas principales que deben considerarse en cada situacioacuten Maacutes adelante en este capiacutetulo se ofrece maacutes informacioacuten sobre cada una ellas y sobre las limitaciones que plantean

Otro gran problema indirectamente asociado a la aplicacioacuten de estas teacutecnicas es la forma y espe-cialmente el periacuteodo de ejecucioacuten Ademaacutes del fracaso de la intervencioacuten que conlleva una ejecu-cioacuten deficiente el mal uso de estas teacutecnicas supo-ne con frecuencia un encarecimiento del proyecto de restauracioacuten A lo largo de este texto aporta-mos diversos ejemplos de estas deficiencias

VIII ERRORES HABITUALES

IX UN EJEMPLO DE EacuteXITO

Figura 15 Vista del talud del ejemplo

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IacuteNDICE

X UN EJEMPLO DE FRACASO

iquestDoacutende

El grupo de trabajo de Ecologiacutea y Fisiologiacutea de Plantas Mediterraacuteneas del Centro de Ciencias Medioambientales del CSIC durante los antildeos 2000-2005 llevoacute a cabo un proceso de seguimien-to y mejora de las actuaciones de revegetacioacuten e hidrosiembra realizadas en dos tramos de la Au-topista de la Costa del Sol (Maacutelaga y Caacutediz) La zona presenta una temperatura media de 185 degC y un reacutegimen de precipitacioacuten de 873 mm anuales Las formaciones litoloacutegicas maacutes importantes estaacuten dominadas por areniscas y afloramientos calizos ocasionales

iquestQueacute se hizo

Los taludes fueron hidrosembrados con una mez-cla comercial de semillas (mayoritariamente le-guminosas y gramiacuteneas) y componentes para es-tabilizar y fertilizar el suelo (veacutease Tabla 1) La densidad de la mezcla aplicada fue de 35 gm-2 La hidrosiembra se realizoacute en dos pasadas la pri-mera con todos los ingredientes y la segunda solo con los estabilizantes y el mulch habitual

iquestQue ocurrioacute

Mientras que en los terraplenes se halloacute una cober-tura vegetal media de casi el 80 en los desmontes

fue del 20 La riqueza floriacutestica tambieacuten fue ma-yor en los terraplenes La comparacioacuten de terraple-nes hidrosembrados con aquellos que no lo fueron reveloacute escasas diferencias en la cobertura biomasa y riqueza de especies La hidrosiembra no obtuvo mejores resultados que la propia colonizacioacuten na-tural en estas condiciones favorables

iquestPor queacute ocurrioacute y como solucionarlo

1) Una de las principales causas es que la hidro-siembra se hizo fuera de la eacutepoca recomendable Hay que tener en cuenta el tipo de clima el tipo de talud (en desmontes seraacute siempre maacutes difiacutecil que funcione esta teacutecnica) la pendiente y las ca-racteriacutesticas del suelo Tambieacuten la existencia de vegetacioacuten proacutexima que ayude a la propagacioacuten de especies cercanas Cuando estos factores son los adecuados la hidrosiembra deberiacutea ser recon-siderada y en ciertos casos suspendida

2) Las difiacuteciles condiciones de los desmontes limitan la colonizacioacuten de la vegetacioacuten de ahiacute su escasa cobertura vegetal En general se recomienda mejo-rar la fertilidad del suelo y reducir la pendiente con la tierra vegetal o mediante otras medidas ecotecnoacute-logicas antes de hidrosembrar La parte superior de los desmontes suelen tener una banda que frecuen-temente estaacute colonizada por vegetacioacuten natural a partir de la cual se produce la colonizacioacuten del talud por lo que se recomienda conservarla y promoverla

Figura 16 Resultados de la peacuterdida de sedimentos bajo los distintos tratamientos ensayados (manta de esparto manta de coco y control)

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Desnudo

Coco

Esparto

Al contrario que el caso anterior la revegetacioacuten de un tramo de la A-92 correspondiente a la zona de Veacutelez Rubio (Almeriacutea) ejecutada por Ferrovial consiguioacute una elevada cobertura vegetal En este caso las principales diferencias fueron hidrosem-brar en otontildeo que es el periacuteodo maacutes adecuado

en esa zona e incrementar previamente la fertili-dad del suelo mediante la aplicacioacuten de estieacutercol El incremento previo de la fertilidad del suelo ha aumentado notablemente el rendimiento de esta teacutecnica en otros lugares como por ejemplo en un tramo de la Nndash4 cercano a Baileacuten

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Actuaciones para minimizar los efectos sobre la fauna

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CAPIacuteTULO 8 Actuaciones para minimizar los efectos sobre la fauna

Juan E Malo y Cristina Mata

I ALCANCE Y CONTENIDOS

La restauracioacuten ecoloacutegica asociada a cualquier ac-tividad humana debe atender no solo a recuperar los aspectos visuales y esteacuteticos de los sistemas naturales alterados sino tambieacuten a los aspectos funcionales de los mismos en los que desempentildea un papel importante la fauna Puede decirse que la conciencia ambiental de la sociedad va evolu-cionando y que a raiacutez de ella se desarrolla una legislacioacuten progresivamente maacutes estricta legisla-cioacuten que condiciona de forma creciente la puesta en marcha de nuevos proyectos Asiacute hace tres deacute-cadas la atencioacuten a los aspectos paisajiacutesticos re-sultaba pionera en nuestra legislacioacuten (veacutease el RD 29941982 de Restauracioacuten de espacios naturales afectados por actividades extractivas) pero hoy en diacutea el espiacuteritu y la letra de nuestras leyes ambien-tales trascienden estos aspectos para abordar la conservacioacuten integral de la naturaleza Como con-secuencia de estas leyes de una mayor conciencia ambiental y del desarrollo teacutecnico en la actuali-dad se presta gran atencioacuten a la minimizacioacuten de los efectos que tienen las infraestructuras sobre la integridad de los ecosistemas Dentro de este marco el alcance del presente capiacutetulo comprende el conjunto de actuaciones aplicadas en carreteras y ferrocarriles para minimizar los efectos sobre la fauna atendiendo al nivel de conocimiento teacutecnico actual (y su aplicacioacuten) y con una atencioacuten priori-taria al mantenimiento de la funcionalidad de los haacutebitats fragmentados durante la fase de funciona-miento del proyecto Esta concrecioacuten de objetivos

que deja de lado medidas correctoras aplicadas en el aacuterea de afeccioacuten directa del proyecto durante la fase de construccioacuten se justifica tanto por las in-evitables limitaciones existentes para la realizacioacuten de este capiacutetulo como por el hecho de que las escalas espaciales y temporales de mayor preocu-pacioacuten para la restauracioacuten de la fauna son precisa-mente la mayor amplitud espacial (todo el entorno del proyecto) y temporal (las deacutecadas en que estaraacute operativa la infraestructura)

La reduccioacuten de los efectos negativos derivados de las carreteras y ferrocarriles sobre la fauna se aborda en el disentildeo y desarrollo de todos los proyectos y los procedimientos de evaluacioacuten de impacto am-biental prestan una atencioacuten destacada a este pun-to No obstante debe destacarse desde el principio la existencia de un sesgo notorio hacia los vertebra-dos terrestres en el disentildeo y aplicacioacuten de actua-ciones de restauracioacuten La falta de conocimientos baacutesicos y maacutes auacuten la praacutectica habitual en ecologiacutea aplicada nos lleva a plantear la inevitable restriccioacuten taxonoacutemica de la informacioacuten que se va a mostrar Si bien los vertebrados terrestres pueden en cier-tas situaciones ejercer como indicadores para otros grupos taxonoacutemicos o hacer de especies paraguas de ellos faltariacuteamos a la realidad si pretendieacutese-mos decir (como se ha hecho con alguna frecuen-cia) que la atencioacuten a los vertebrados es suficiente para asegurar una adecuada evaluacioacuten de impactos (o restauracioacuten) del conjunto de las comunidades animales Por tanto reconociendo la existencia de un amplio campo de mejora futura este capiacutetulo se centra en actuaciones enfocadas a la minimizacioacuten de los efectos de las infraestructuras de transporte sobre los vertebrados

La minimizacioacuten de los efectos sobre la fauna debe atender a las fases de construccioacuten y explotacioacuten de las viacuteas de transporte con evidentes diferencias en su perspectiva temporal Asiacute la fase de cons-truccioacuten de un tramo de carretera o ferrocarril suele durar varios antildeos en los que los impactos puntua-les son de gran intensidad Las medidas correctoras ejecutadas en ella suelen centrarse en la proteccioacuten de haacutebitats o localizaciones concretas formando parte del conjunto de acciones comunes para la proteccioacuten del entorno del proyecto y con reper-cusiones sobre variados factores ambientales Este tipo de actuaciones son de aplicacioacuten frecuente a todo tipo de proyectos y en el caso de las infra-estructuras de transporte su efectividad estaacute muy mediada por el estudio detallado del territorio y la seleccioacuten de alternativas previa a la ejecucioacuten del proyecto En contraposicioacuten con la construccioacuten la

fase de operacioacuten de una viacutea de transporte es mu-cho maacutes larga ya que la mayoriacutea de ellas se pro-yecta con una vocacioacuten de permanencia indefinida Por este motivo cada vez maacutes se atiende a mini-mizar los efectos del proyecto con actuaciones de restauracioacuten enfocadas a mantener la funcionalidad natural del aacuterea a largo plazo Sobre este tipo de medida se centran los proacuteximos apartados dado que su disentildeo y peculiaridades de aplicacioacuten son claramente diferenciadas y propias para la fauna frente a actuaciones maacutes geneacutericas de adecuacioacuten ambiental de las obras como las habitualmente de-sarrolladas durante la construccioacuten de las infraes-tructuras

Por uacuteltimo y con el mismo aacutenimo de enfocarse hacia las actuaciones de disentildeo y aplicacioacuten maacutes comuacuten para la proteccioacuten de la fauna el presente capiacutetulo no trata las medidas tomadas en el entorno adya-cente a la viacutea Si bien las labores de restauracioacuten tra-tadas mayoritariamente en el resto de capiacutetulos de este libro se circunscriben a estas zonas fuertemen-te impactadas durante la fase de obra el objetivo de conservacioacuten de la fauna de un aacuterea atravesada por una carretera o ferrocarril debe enfocarse prin-cipalmente hacia un entorno maacutes distante tratando de asegurar el mantenimiento de las comunidades animales existentes en eacutel

Con estas restricciones en mente los principales objetivos del capiacutetulo se centran en sintetizar el conocimiento maacutes relevante sobre los efectos de las infraestructuras de transporte sobre la fauna y las medidas correctoras propuestas y ensayadas en las uacuteltimas deacutecadas para reducirlos Desde el punto de vista de las propuestas de actuacioacuten se compila y presenta la tipologiacutea de medidas exis-tente acompantildeada de las indicaciones teacutecnicas maacutes relevantes Para terminar se realiza una eva-luacioacuten general de las experiencias acumuladas en este aacutembito de trabajo sentildealando los aspectos positivos y negativos maacutes importantes derivados de la aplicacioacuten de estas actuaciones asiacute como las perspectivas de investigacioacuten actuales En la medida de lo posible en el texto se han incluido referencias a casos desarrollados en la Peniacutensula Ibeacuterica que pueden ser de maacutes faacutecil aplicacioacuten por el lector o en su defecto las maacutes recientes o relevantes procedentes de otras partes del mun-do Aparte de las referencias presentes al final del capiacutetulo el lector dispone del apartado de lsquoBi-bliografiacutea baacutesica y enlacesrsquo al final del libro en el que aparecen las principales fuentes documen-tales para el disentildeo y aplicacioacuten de este tipo de actuaciones

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Las infraestructuras lineales generan de modo direc-to e indirecto los cinco tipos de efectos reconocidos como principales amenazas para la conservacioacuten de la biodiversidad peacuterdida y degradacioacuten de haacutebitats frag-mentacioacuten de poblaciones mortalidad de individuos e introduccioacuten de especies (Meffe y Carroll 1997 Forman y Alexander 1998 Forman et al 2003 Coffin 2007) Estos efectos adquieren distinta relevancia entre siacute y en las distintas fases de vida de las infraestructuras de transporte y han recibido una atencioacuten dispar tanto en la investigacioacuten como en la propuesta de medidas destinadas a la restauracioacuten de las aacutereas afectadas por la construccioacuten de carreteras y ferrocarriles

El efecto maacutes inmediato derivado de la construccioacuten de cualquier infraestructura viaria es la peacuterdida de haacutebitats que conlleva un inevitable descenso en la capacidad de carga del sistema y por tanto del tamantildeo de las po-blaciones ligadas a estos enclaves (Lodeacute 2000 Fahrig 2002) Pese a la reducida anchura de la plataforma de las infraestructuras (14 m en liacuteneas de alta velocidad y aproximadamente 25 m en autoviacuteas) su gran longitud lleva a que el aacuterea total finalmente ocupada sea muy grande Ademaacutes durante el proceso de construccioacuten es necesario acondicionar para el trabajo un aacuterea mucho maacutes amplia y en todo caso resulta necesario antildeadir las superficies que inevitablemente se transforman en des-montes y terraplenes como consecuencia directa de la interseccioacuten del perfil de la traza con el terreno natural Por este motivo es frecuente asumir que la elimina-cioacuten de haacutebitats como consecuencia de la construccioacuten de una carretera se aproxima a los 100 m de anchura (Forman y Deblinger 2000) Dado que el entorno afec-tado directamente por las obras pero no ocupado por la infraestructura y sus elementos accesorios se puede recuperar de forma maacutes o menos completa tras su fina-lizacioacuten este tipo de efectos se asocia de modo priori-tario a la fase de construccioacuten pero resulta permanente al menos en el aacuterea de ocupacioacuten directa de la carretera o la liacutenea feacuterrea

En segundo lugar se produce una degradacioacuten de haacutebitats derivada de una serie de perturbaciones (cambios en las condiciones que determinan los pa-raacutemetros vitales de las especies) ligadas a la activi-dad humana y la intensidad del traacutefico Entre aque-llas resultan especialmente destacables el ruido las emisiones de gases la contaminacioacuten lumiacutenica el aumento de los niveles de contaminantes en el sue-lo y el aumento de la accesibilidad humana al terri-torio (veacuteanse las revisiones de Forman y Alexander 1998 Forman et al 2003 y Coffin 2007) La distancia

de afeccioacuten dependeraacute del tipo de viacutea la intensidad de traacutefico y la especie en cuestioacuten pudiendo variar en la mayoriacutea de los casos entre 100 y 500 m si bien para especies maacutes sensibles se han descrito efectos a maacutes de 1000 m (Forman y Deblinger 2000 Nelle-mann et al 2003 Jaeger et al 2005) En su conjunto este tipo de efectos multiplica el aacuterea de afeccioacuten de las infraestructuras y se refleja en una disminucioacuten auacuten mayor del aacuterea efectivamente utilizable por las especies poco tolerantes a la perturbacioacuten humana yo una reduccioacuten de la densidad en el entorno de la infraestructura Como contrapartida se debe in-dicar que las especies maacutes tolerantes a la actividad humana pueden verse beneficiadas en esta aacuterea ya sea de forma directa por la existencia de recursos (pe especies carrontildeeras) como por efectos indi-rectos mediados por la disminucioacuten de las especies menos tolerantes (sean estas competidoras o de-predadoras) Como resultado las infraestructuras ejercen de corredores para las especies antropoacutefilas La degradacioacuten del entorno ocurre tanto durante la construccioacuten como en la explotacioacuten del proyecto y aunque los efectos sean maacutes agudos en la fase de construccioacuten debe tenerse en cuenta que los efec-tos croacutenicos del funcionamiento de la infraestructura se extenderaacuten durante toda su vida uacutetil

El tercer grupo de efectos se asocia a la fragmen-tacioacuten de los haacutebitats disectados por la viacutea enten-diendo aquella como la subdivisioacuten en fragmentos de menor tamantildeo y con ciertas dificultades de conexioacuten entre siacute (Bascompteacute y Soleacute 1996) La fragmentacioacuten de haacutebitats conlleva la de aquellas poblaciones asen-tadas en ellos lo que se refleja en poblaciones de menor tamantildeo y relativamente desconectadas entre siacute (Haila 2002 Mcgarigal y Cushman 2002) Resulta con-veniente indicar que la fragmentacioacuten se caracteriza y distingue de la destruccioacuten y degradacioacuten de haacutebitats por los dos efectos particulares recieacuten mencionados el menor tamantildeo de las poblaciones sustentadas en cada tesela de haacutebitat aumenta su probabilidad de extincioacuten local (por efecto del azar) y la disminucioacuten de la conectividad conlleva la disminucioacuten de la pro-babilidad de recolonizacioacuten desde aacutereas proacuteximas junto con la posible aparicioacuten de efectos geneacuteticos negativos para la supervivencia de la poblacioacuten Aun-que se ha debatido acerca de la relevancia de la frag-mentacioacuten y hasta queacute punto se debe favorecer la co-nectividad en la actualidad existe el consenso de que la fragmentacioacuten puede ser incluso maacutes perjudicial para la salud del ecosistema atravesado por una in-fraestructura que la propia destruccioacuten y degradacioacuten

de haacutebitats (Robinson et al 1992 Lindenmayer et al 1999 Fahrig 2003)

El cuarto grupo de efectos tambieacuten vinculados a la fase de explotacioacuten deriva de un inevitable incremen-to de la mortalidad por atropello de la fauna silvestre Las carreteras o ferrocarriles pueden actuar como un sumidero para las poblaciones proacuteximas a la infraes-tructura pudiendo llegar a constituir una seria amena-za para especies de poblaciones reducidas y con bajas tasas de reproduccioacuten (Ferreras et al 1992 Forman y Alexander 1998) Este tema ha suscitado gran aten-cioacuten mediaacutetica y cientiacutefica tanto por la fuerza visual y emocional de la presencia de animales atropellados en las carreteras como por las implicaciones econoacute-micas y sociales que tiene (Romin y Bissonette 1996 Malo et al 2004) Este problema empieza a preocupar tambieacuten para el caso de los trenes de alta velocidad habieacutendose publicado recientemente una monografiacutea sobre el particular (Rodriacuteguez et al 2008)

Por uacuteltimo la construccioacuten de infraestructuras facili-ta la expansioacuten de especies invasoras a lo largo de ellas ya que se ven favorecidas por el haacutebitat alte-rado presente en el entorno de la viacutea Aunque desde la biologiacutea de la conservacioacuten se acostumbra a dar un tratamiento especiacutefico a este problema concep-tualmente se podriacutea englobar como un subtipo de degradacioacuten de haacutebitat con la salvedad de que las especies favorecidas en este caso no se encontraban presentes en el ecosistema con anterioridad La gra-vedad de los efectos que aparecen frecuentemente vinculados a las especies exoacuteticas puede justificar su tratamiento independiente pero parece adecua-do no profundizar aquiacute en esta discusioacuten (de valor meramente acadeacutemico) y siacute remarcar que el efecto corredor para las especies invasoras de las infraes-tructuras lineales se ha descrito en algunas ocasio-nes (Pauchard y Alaback 2004 Barbosa et al 2010)

1 Revisioacuten del conocimiento existente y de las praacutecticas de restauracioacuten desarrolladas

Los muacuteltiples efectos derivados de la construccioacuten y posterior explotacioacuten de las infraestructuras lineales de transporte son una constante preocupacioacuten que des-de el campo de la biologiacutea de la conservacioacuten se ha conseguido trasladar al campo teacutecnico y de toma de decisiones lo que ha conducido a la elaboracioacuten de numerosos documentos teacutecnicos En el contexto espa-ntildeol la primera Guiacutea metodoloacutegica para la elaboracioacuten de Estudios de Impacto Ambiental (Suaacuterez 1989) supuso todo un hito en este aacutembito recogiendo las primeras propuestas para minimizar los impactos de ferrocarriles

II EFECTOS DE LAS INFRAESTRUCTURAS SOBRE LOS VERTEBRADOS y carreteras Posteriormente en la deacutecada de los noven-ta con la incorporacioacuten de medidas correctoras en los nuevos proyectos de infraestructuras se siguioacute avan-zando en el estudio de los impactos generados por estas y se elaboraron dos guiacuteas en las que se recogiacutean un amplio abanico de medidas correctoras destinadas a minimizar estos impactos (Velasco et al 1995 Rosell y Velasco 1999) En la misma liacutenea se han continuado publicando guiacuteas praacutecticas destinadas a mejorar el di-sentildeo de estas medidas como la desarrollada a escala europea por Iuell et al (2005) fruto de la Accioacuten COST 341 A escala nacional destacan las lsquoPrescripciones teacutecnicasrsquo para el disentildeo de pasos de fauna y vallados perimetrales elaboradas por el Ministerio de Medio Am-biente (2006) asiacute como la monografiacutea sobre pasos de fauna publicada por el CEDEX en la que se combinan resultados derivados del seguimiento de estas medidas con indicaciones de disentildeo (Hervaacutes et al 2006)

Sobre la base de estos documentos y con atencioacuten prioritaria a las indicaciones teacutecnicas maacutes modernas y contrastadas a continuacioacuten se presenta una reco-pilacioacuten de las principales actuaciones desarrolladas para evitar la fragmentacioacuten de poblaciones por las infraestructuras lineales En dicha recapitulacioacuten se presentan ademaacutes las recomendaciones teacutecnicas maacutes relevantes en cuanto a disentildeo y puesta en marcha

En liacuteneas generales y de forma muy simplificada se puede realizar una primera clasificacioacuten de estas me-didas correctoras distinguiendo dos tipologiacuteas baacutesicas a) en funcioacuten de su ubicacioacuten respecto a la viacutea (inferior frente a superior) y b) dependiendo del disentildeo (exclu-sivo para la fauna frente a mixto con uso humano) No obstante la diferenciacioacuten de tipos es mucho maacutes pro-lija tal y como se detalla a continuacioacuten Mencioacuten apar-te requieren los cerramientos perimetrales que ejercen una funcioacuten complementaria y a su vez imprescindible para el correcto funcionamiento de estos pasos

Figura 1 Cabras montesas (Capra pyrenaica subsp hispanica) paci-endo en los bordes de la carretera A-92 Sierra Nevada (Granada)

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III TIPOLOGIacuteA DE LAS MEDIDAS CORRECTORAS

1 Cerramiento perimetral

El cerramiento perimetral (vallado) de las infraestruc-turas es en la actualidad obligatorio para todas las liacuteneas feacuterreas (nuevas o antiguas habilitadas para velocidades superiores a 160 kmh) las viacuteas de alta capacidad (autoviacuteas y autopistas) y algunas carrete-ras convencionales (pe en entornos urbanos) y se realiza puntualmente en otras carreteras convencio-nales El principal objetivo del vallado es impedir la presencia de personas o animales de gran tamantildeo (ganado principalmente) en la viacutea que suponen un grave riesgo para los vehiacuteculos y sus ocupantes en caso de colisioacuten Por este motivo el vallado tradicio-nal soliacutea consistir en una malla de luz relativamente amplia y aproximadamente de 15 m de altura

Debido al incremento de las poblaciones de ungu-lados silvestres y en un intento de reducir el nuacute-mero de atropellos de animales de menor tamantildeo los vallados actuales son maacutes altos resistentes e impermeables a la fauna silvestre Las principales recomendaciones en este sentido se concretan en

bull La altura debe ser superior a 18 m y en caso de existir poblaciones de ciervo en el entor-no elevarse hasta los 2 m En lugares con topografiacutea irregular se debe vigilar el manteni-miento de estas cotas respecto de los puntos desde los que los animales puedan saltar

bull La extensioacuten del vallado en altura mediante una visera suele justificarse como meacutetodo de impedir el escalamiento por personas y para dificultar el salto de los ceacutervidos Desgracia-damente se ha comprobado que los ciervos pueden quedar enganchados por las cuernas (al descorrear principalmente) y morir en es-tas estructuras Por este motivo en caso de colocarse visera es recomendable situarla ha-cia el interior de la infraestructura (Figura 2A)

bull Durante la instalacioacuten se debe prestar atencioacuten a que no queden huecos debidos a la topogra-fiacutea irregular del terreno o a una deficiente unioacuten con estructuras como los pasos inferiores

bull La parte inferior del vallado debe evitar que la atraviesen animales de menor tamantildeo lo que se consigue mediante el uso de mallas de luz progresiva yo con la utilizacioacuten de una malla accesoria en los 50-100 cm inferiores del

vallado (Figura 2B) En ocasiones maacutes pun-tuales (pe alrededor de charcas de criacutea) se utilizan vallas macizas de diversos materiales para evitar el acceso de anfibios y reptiles a las carreteras (Figura 3A)

bull La parte inferior de la malla debe anclarse o enterrarse en el suelo de modo que se dificul-te en lo posible la apertura de pasos bajo ella (pe por los conejos) o el levantamiento de la valla (tejoacuten jabaliacute) Ademaacutes puede dificultar la apertura de huecos por la escorrentiacutea En el caso de zonas con presencia de jabaliacute suele recomendarse un enterramiento de 30-40 cm o complementarse con un cementado de la base de la malla (Figura 3B)

Figura 3 Ejemplos de buenas praacutecticas en cerramientos vallado es-pecial para evitar el acceso de anfibios a la calzada (A) ubicado en un tramo conflictivo por el paso estacional de anfibios en la carretera M-618 (Madrid) y detalle de vallado enterrado en la base (B) en la autopista AP-51 en la provincia de Aacutevila

En todo caso el mantenimiento del vallado es vi-tal para asegurar que no pierda eficacia ya que la generacioacuten de huecos por los propios animales ac-cidentes con salida de la viacutea o las condiciones am-bientales resulta inevitable La deteccioacuten de estas alteraciones en el vallado puede hacerse durante la vigilancia rutinaria del entorno coincidiendo con las tareas de limpieza o tras detectarse el atropello de animales de mediano o gran tamantildeo en la calzada

La presencia del cerramiento y su adecuacioacuten para ha-cerlo impermeable a la fauna tienen un posible efecto negativo si un animal consigue entrar en la infraestruc-tura le seraacute extraordinariamente difiacutecil salir de ella Tal y como se ha mencionado anteriormente el manteni-miento en perfecto estado del vallado es complejo por lo que praacutecticamente siempre quedaraacute alguna gatera o hueco por el que pueda entrar un animal Ademaacutes toda carretera vallada posee en cada enlace con otra

viacutea de menor entidad tantas aperturas en el vallado como entradassalidas de vehiacuteculos tenga por lo que la presencia esporaacutedica de animales dentro del cerra-miento es inevitable En consecuencia los vallados ac-tuales al menos en lugares sensibles para la fauna disponen de dispositivos de escape que permiten el paso en un solo sentido (hacia el exterior) de los ani-males que se encuentren en la infraestructura

En los uacuteltimos antildeos se han instalado multitud de dispositivos de este tipo en las nuevas infraestruc-turas habieacutendose ensayado dos tipos principales puertas y rampas de escape La eficacia de estas me-didas debe estar determinada por dos factores fun-damentales su disentildeo y ubicacioacuten si bien hasta el momento son escasas las investigaciones en las que se haya comprobado su efectividad para permitir la salida de los animales que accidentalmente se han internado en la viacutea (porcentaje de eacutexito tiempo de salida etc veacutease no obstante Cuadro 1) Siacute se han evaluado algunos elementos clave de su funcionali-dad en infraestructuras en las que se han instalado y existen observaciones maacutes o menos sistemaacuteticas que han permitido actualizar las recomendaciones sobre su disentildeo respecto a las primeras propuestas

Las puertas o portillos de escape consisten en es-tructuras incluidas en el vallado y disentildeadas de modo que los animales puedan abrirlas en el sen-tido de salida de la infraestructura pero no en el contrario Los modelos maacutes habituales consisten en una estructura de una sola hoja basculante formada por un marco rectangular con las bisagras ubicadas en su parte superior Este tipo de disentildeo se ha reali-zado en dimensiones variables desde apenas 25 cm de lado hasta 180 m de alto siendo poco recomen-dable utilizar tamantildeos demasiado angostos para la mayor parte de las especies o tan grandes que el peso de la puerta impida su apertura a la praacutectica totalidad de las especies En todo caso los portillos de escape tienen dos problemas de mantenimiento que deben valorarse adecuadamente las piezas moacute-viles requieren un engrasado perioacutedico para conser-var su funcionalidad y la hierba crecida en la parte baja de la puerta debe eliminarse para evitar el atas-co de la estructura Para este uacuteltimo fin en ocasio-nes se cementa la superficie sobre la que se apoya la puerta Por uacuteltimo las puertas de varillas flexi-bles (de movimiento horizontal) que se ensayaron inicialmente para facilitar la salida de los ceacutervidos (Velasco et al 1995) se encuentran desaconsejadas tras comprobarse que estos animales aprenden a abrirlas en sentido contrario y las usan rutinaria-mente para acceder a los bordes de la carretera en los que alimentarse

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Figura 2 Tipos de cerramientos recomendados vallado de 2 m de altura con visera hacia el interior (A) dispuesto en un tramo del Tren de Alta Velocidad Madrid-Sevilla (Toledo) y vallado reforzado en la base (B) en un tramo de la autoviacutea A-66 (Leoacuten)

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En liacuteneas generales la utilizacioacuten de dispositivos moacuteviles (pe puertas basculantes) se recomienda uacutenicamente para especies de tamantildeo medio y pe-quentildeo (Figura 4A) y solo si se realizan labores de mantenimiento de forma regular

El segundo tipo de estructura recomendado actual-mente como mejor opcioacuten son las rampas de esca-pe De modo simplificado se trata de estructuras de relleno que facilitan el acceso de los animales a la parte alta del vallado con el objetivo de que puedan saltar al exterior El caraacutecter unidireccional de dichas estructuras se consigue realizando el relleno en un solo lado del vallado lo que suele obligar a sustituir en ese punto la valla metaacutelica por una estructura riacutegida que soporte la carga del montiacuteculo de tierra (o ramas) que forma la plataforma de ascenso hasta la parte alta del cerramiento Las primeras estructu-ras de este tipo que se establecieron consistiacutean en rampas de apenas 40-50 cm de ancho construidas con ladrillos yo tableros cuya funcionalidad se ha puesto en duda para especies medianas y grandes Por este motivo actualmente suelen realizarse en forma de rampas de tierra apoyadas sobre un muro adosado al interior del vallado (Figura 4B)

Cuadro 1 Efectividad de los dispositivos de escape para ciervos (Bissonette y Hamer 2000)

En las carreteras de Utah (Estados Unidos) donde la presencia de ceacutervidos en la calzada era relativamente frecuente se realizoacute un estudio para evaluar la efectividad de dos tipos de dispositivos de escape las rampas de escape de tierra frente a las puertas unidireccionales

En dichos estudios se comproboacute coacutemo los ciervos utilizaban entre 8 y 10 veces maacutes las rampas de escape frente a las puertas con la ventaja antildeadida de que las rampas apenas requieren mantenimiento

Los autores recomiendan la instalacioacuten de este tipo de rampas cada 400 m en lugares con elevada concentracioacuten de atropellos y cada 800 m en el resto

Finalmente existen dos recomendaciones que se con-sideran claves para facilitar que un animal accidental-mente entrado en la viacutea y que no dispone de infor-macioacuten aprendida sobre ella pueda utilizar los dispo-sitivos de escape En primer lugar solo si la estructura de escape se encuentra ubicada en una querencia del animal (punto en el que de forma natural el animal va a buscar refugio o intentar huir) es previsible que la utilice Por este motivo se sugiere que en la medida de lo posible los dispositivos de escape se ubiquen en esquinas del vallado a poder ser en la base de tramos en terrapleacuten en los que la plataforma se encuentra maacutes alta que el propio vallado o en otros puntos que sean previsiblemente direcciones de huida natural de los animales En segundo lugar se recomienda disponer una pequentildea valla de forma perpendicular al cerra-miento que emboque a los animales hacia el punto en que se encuentra el dispositivo de escape

2 Drenajes

Las obras de drenaje trasversal a la viacutea (lsquodrenajesrsquo en adelante) son estructuras imprescindibles en las infra-estructuras lineales y resultan muy numerosas en la mayor parte de las situaciones La necesidad de eva-cuar la escorrentiacutea superficial procedente de las super-ficies de baja capacidad de infiltracioacuten (plataformas taludes) y el hecho de que la traza corte de for-ma repetida el terreno y los flujos de agua naturales obliga a construir obras de drenaje que atraviesen la carretera o la liacutenea feacuterrea a intervalos frecuentemente inferiores a los 500 m Esta distancia es menor cuanto maacutes ondulado es el paisaje atravesado y mayores las

precipitaciones del aacuterea en cuestioacuten Dado el caraacutecter de estructuras lsquofuncionales de la viacutearsquo (necesarias por motivos intriacutensecos a la construccioacuten de la infraestruc-tura) y muy abundantes son las candidatas principales para ejercer un papel relevante en la permeabilizacioacuten para la fauna de las carreteras y ferrocarriles como han demostrado diferentes estudios (Yanes et al 1995 Clevenger et al 2001 Mata et al 2005)

La adaptacioacuten de los drenajes para facilitar su uso por la fauna es por tanto una de las medidas maacutes frecuentemente aplicadas y de mayor potencial des-de una perspectiva de coste-beneficio Ademaacutes su uso por diferentes grupos de vertebrados se ha com-probado incluso en el caso de carreteras sin vallar y traacutefico moderado en las que estos podriacutean cruzar por encima de la plataforma (Ascensatildeo y Mira 2007) La adaptacioacuten de los drenajes pasa por facilitar el acceso de los animales hacerlos maacutes amplios y lu-minosos y evitar que su encharcamiento impida el uso por especies no asociadas a medios acuaacuteticos

Las principales recomendaciones son

bull Salvo en situaciones excepcionales (pe tra-mos largos en trinchera) todas las estructuras de este tipo deben construirse de lado a lado del vallado evitando la existencia de drenajes internos al vallado

bull La revegetacioacuten en torno a las embocaduras es-pecialmente los laterales de las entradas debe disentildearse de modo que minimizando el riesgo de obstruir el drenaje se favorezca la aproxi-macioacuten de las especias maacutes reacias (pe con la plantacioacuten tanto de herbaacuteceas como de matorra-les en los laterales de modo que ofrezcan cober-tura a las distintas especies hasta la misma boca de la estructura actuando a modo de embudo)

bull El vallado debe servir para dirigir los animales hacia estos puntos lo que puede requerir un refuerzo de la base con malla de luz reducida o en aacutereas sensibles de anfibios la utiliza-cioacuten de un vallado especial En estos casos se recomienda un vallado opaco de paredes lisas y al menos de 40 cm de alto que sirva de estructura guiacutea e impida su acceso a la calzada (Figura 2)

bull Los accesos deben resultar sencillos y el re-corrido previsto de los animales tener una continuidad adecuada evitando el cruce de cauces canales escalones o saltos Con fre-cuencia las entradas o salidas de los drenajes

deben pavimentarse o cubrirse de cantos de modo que se impida la erosioacuten del sustrato a la vez que se dispone de una superficie por la que los animales pueden acceder

bull Las dimensiones miacutenimas recomendadas para la seccioacuten de los drenajes son 2 x 2 m Se recomienda sobredimensionar estas estructuras (tradicionalmente se utilizaban cantildeos de (50-60 cm) para reducir el efecto tuacutenel de modo que la anchura del paso de-beraacute aumentarse si la longitud es mayor El iacutendice de apertura (Cuadro 2) recomendado en drenajes es de 01-05 si bien valores de 004-006 se consideran adecuados para los anfibios

bull La existencia de una apertura intermedia que deacute algo de luz al drenaje en general una ar-queta con rejilla por la que evacuacutean las cune-tas ubicadas en la mediana de las autoviacuteas se considera positiva para el uso por la fauna

bull Se recomienda que la seccioacuten de los drenajes tenga la base plana ya que la altura que al-canza el agua en momentos con escorrentiacutea es muy inferior De hecho en este tipo de estructura la existencia de una superficie de paso en seco o con apenas un par de cen-tiacutemetros de agua es frecuente a lo largo de praacutecticamente todo el antildeo

bull En los casos en que se prevea el encharcamien-to maacutes o menos continuo de la obra de drenaje (arroyos permanentes ubicacioacuten en aacutereas en-charcadizas) se recomienda la disposicioacuten de banquetas laterales que aseguren la existencia de paso en seco (Figura 5) La efectividad de estas estructuras se ha comprobado incluso en lugares en que se han construido a posteriori

Figura 5 Drenaje adecuado con banquetas laterales (TAV Madrid Barcelona tramo en la provincia de Guadalajara)

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Figura 4 Dispositivo de escape para tejones en una autoviacutea hol-andesa (arriba) y rampa de escape en un tramo de la provincia de Caacuteceres en la autoviacutea A-66 (abajo)

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Cuadro 2 Iacutendice de apertura

El iacutendice de apertura (IA) de una estructura transversal a una infraestructura es un indicador comuacutenmente utilizado para establecer las dimensiones recomendables para asegurar el uso por la fauna Este iacutendice relaciona la seccioacuten de la estructura con su longitud de modo que permite ajustar el ancho de los pasos en funcioacuten de la longitud que deben tener en razoacuten del tipo de infraestructura y las condiciones locales de su ubicacioacuten (Olbrich 1984) Su amplia aceptacioacuten proviene de que este paraacutemetro puede servir como un indicador (inverso) del efecto tuacutenel presuntamente percibido por las especies al utilizar las estructuras inferiores a la viacutea (Clevenger et al 2005 y Hervaacutes et al 2006)

El iacutendice de apertura se definioacute originalmente para las estructuras inferiores a la viacutea como

IA pasos inferiores = seccioacutenlongitud

Figura 6 Ejemplos de caacutelculo del iacutendice de apertura en dos drenajes de diferente seccioacuten drenaje circular (izquierda) y drenaje adecuado (derecha)

No obstante tambieacuten ha sido adaptado para los pasos superiores para los cuales se ha establecido como una relacioacuten entre el ancho del paso y la longitud de este

IA pasos superiores = anchuralongitud

Por uacuteltimo las obras de drenaje transversal requie-ren un mantenimiento adecuado para no perder su funcionalidad como pasos de fauna En este sentido debe destacarse la propensioacuten a que se acumule basura en ellos arrastrada por el agua desde las cu-netas de la carretera principalmente Igualmente es frecuente el depoacutesito de sedimentos y consecuente embalsado de agua en el lado inferior como resulta-do de la peacuterdida de velocidad del agua a la salida de la obra de faacutebrica Ambos hechos pueden condicio-nar el uso por la fauna por lo que deben ser objeto de atencioacuten entre las tareas de mantenimiento

3 Pasos inferiores multifuncionales

Igual que en el caso anterior este tipo de pasos es inherente a toda infraestructura viaria estando

disentildeados para reponer caminos o pistas intersec-tadas por la viacutea Su frecuencia estaacute muy relacionada con la intensidad de uso humano y la estructura de la propiedad del territorio siendo maacutes frecuentes en zonas agriacutecolas y en las que la propiedad estaacute muy fragmentada lo que aumenta el nuacutemero de este tipo de estructuras presentes antes de construirse la infraestructura Debido a su menor coste de cons-truccioacuten en comparacioacuten con los pasos superiores las reposiciones de caminos se proyectan bajo la ca-rretera o el ferrocarril maacutes frecuentemente que sobre ellos excepto en paisajes muy llanos

Unas miacutenimas labores de adecuacioacuten de estas es-tructuras contribuyen a aumentar la permeabilidad de la viacutea facilitando maacutes sitios por los que la fauna puede franquear la infraestructura Entre ellas cabe destacar

bull Se recomienda el solado de tierra ya que los animales de menor tamantildeo rehuacuteyen atravesar superficies grandes de asfalto o cemento (Fi-gura 7A) En los casos en que por el paso dis-curre una carretera asfaltada si el traacutefico por ella no es muy intenso se pueden acondicio-nar uno o ambos laterales de la misma para el paso de los animales mediante el solado de tierra En estos casos se deberiacutea respetar al menos 4-6 m de ancho para el uso animal (Figura 7B)

bull En las aacutereas laterales destinadas al uso ani-mal se pueden disponer tocones o pequentildeos acuacutemulos de piedras que sirvan de refugios naturales para favorecer la utilizacioacuten de estos pasos por pequentildeos vertebrados Con cierta frecuencia es posible aprovechar la presencia de un regato o del drenaje lateral para faci-litar esta funcioacuten aprovechando la tendencia natural de mucho animales a desplazarse si-guieacutendolos

bull Se recomienda que el iacutendice de apertura se encuentre en el rango 06-15 y en aacutereas con poblaciones de ungulados disentildear los pasos siempre para que alcancen valores de iacutendice de apertura de 15 o superiores

bull Uno de los problemas maacutes frecuentemente detectados en los pasos inferiores de tipo mixto es la presencia de accesos comple-jos yo poco acordes con los patrones de

movimiento habitual de los animales En general los accesos maacutes faacuteciles para los animales son aquellos perpendiculares a la viacutea (idealmente con visioacuten del otro lado del paso) sin tramos largos en trinchera profun-da y que mantienen cierta coherencia con las formas del paisaje natural (idealmente en vaguada)

bull La proximidad de la vegetacioacuten en las embo-caduras puede facilitar el paso de animales lo que debe tenerse en cuenta al disentildear la revegetacioacuten del entorno

bull Por facilidad de construccioacuten y menor coste los pasos inferiores de seccioacuten rectangular (lsquocajonesrsquo) realizados mediante encofrado in situ se pueden sustituir por estructuras abo-vedadas construidas a partir de piezas pre-fabricadas La decisioacuten uacuteltima debe tomarse en funcioacuten de las condiciones locales de de-sarrollo del proyecto y de los costes relativos de distintas soluciones manteniendo en todo caso el iacutendice de apertura prescrito para la estructura

Un aspecto del mantenimiento que requieren estas estructuras consiste en evitar que el ancho antildeadido para el uso por la fauna se transforme en lugar de vertido incontrolado de residuos de construccioacuten o de caraacutecter domeacutestico tanto mediante una vigilan-cia adecuada como retirando los desechos que se detecten

Figura 7 Pasos inferiores multifuncionales con adaptaciones para favorecer su uso por la fauna con aacutereas revegetadas a ambos lados del camino en una autoviacutea holandesa (A) y un paso con solado de tierra ubicado en un tramo de la provincia de Guadalajara del TAV Madrid-Barcelona (B)

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4 Pasos superiores multifuncionales

Los puentes construidos para restituir la comuni-cacioacuten entre caminos rurales y carreteras locales interrumpidos por el trazado de la infraestructura pueden ser acondicionados tambieacuten para favorecer su uso por la fauna En general este tipo de estruc-tura es mucho menos utilizada por la fauna que los pasos inferiores multifuncionales con la excepcioacuten de los pasos superiores ubicados en puntos en que la infraestructura discurre en desmonte En estas situaciones la longitud del paso superior suele ser relativamente corta y puede coincidir con puntos frecuentemente utilizados para sus desplazamien-tos por los animales Este uacuteltimo caso suele darse en las pequentildeas lomas cubiertas de vegetacioacuten le-ntildeosa que hay con cierta frecuencia en los terrenos ondulados

Las propuestas de adaptacioacuten de estos pasos son similares a las presentadas anteriormente para los pasos inferiores multifuncionales con un par de in-dicaciones propias de ellos

bull Las dimensiones miacutenimas de estas estructu-ras deben respetar un ancho de por lo menos 10 m y un iacutendice de apertura de 08

bull Se debe minimizar en lo posible la longi-tud de los accesos que deben recorrer los animales por un medio abierto y de es-tructura no natural Si es posible deprimir la rasante de la infraestructura facilita el disentildeo de accesos maacutes cortos y con menor pendiente

bull La revegetacioacuten de las superficies sobre los pasos superiores estaacute muy condicionada por la cantidad de suelo que se puede acumular y tanto maacutes cuanto maacutes aacuterido sea el clima Por ello se debe calcular la estructura de modo que pueda soportar un espesor miacutenimo de tierra de 30 cm si se pretende realizar planta-ciones herbaacuteceas y de 60 cm para mantener vegetacioacuten arbustiva

Ademaacutes es posible aplicar otras recomendaciones propias de los pasos superiores especiacuteficos (pe pantallas laterales opacas) para mejorar el potencial de uso por la fauna (Figura 8)

5 Pasos inferiores especiacuteficos para la fauna

Los pasos inferiores especiacuteficos para la fauna son estructuras que discurren por debajo de la viacutea y cuyo objetivo principal al ser disentildeadas es facilitar los des-plazamientos naturales de los animales a traveacutes de la infraestructura Con cierta frecuencia tienen tambieacuten una utilidad para el drenaje y de hecho la presencia de un canal o regato en ellas puede favorecer su uso por la fauna En estos casos las dimensiones de la estructura no se condicionan por las necesidades de avenamiento sino por las previsibles exigencias de los animales a los que se orienta

Desde el punto de vista estructural se han cons-truido como cajones encofrados in situ boacutevedas de piezas prefabricadas y como pequentildeos puentes de vigas prefabricadas o de losa pretensada siendo

este disentildeo el maacutes habitual (Figura 9) No existe constancia alguna de que uno u otro disentildeo sea maacutes apropiado por lo que el tipo a construir dependeraacute de las condiciones concretas del proyecto La uacuteni-ca indicacioacuten a este respecto es que si se disentildean como puentes se debe evitar (o minimizar) que las juntas generen ruidos fuertes al paso de los vehiacute-culos Se ha comprobado que estos ruidos pueden alterar el comportamiento de los animales en los pasos y aunque no impiden su utilizacioacuten se teme que reduzcan su eficiencia como medida correctora

bull Sus dimensiones deben alcanzar al menos 10 m de ancho y 4 m de altura y en la medi-da de lo posible ser maacutes amplias que estos miacutenimos y dar continuidad a la topografiacutea de la vaguada en que se instalen

bull Dado que ejercen una funcioacuten fundamental en la permeabilizacioacuten de las infraestructuras para los grandes vertebrados su iacutendice de apertura debe superar el valor de 15 esta-blecido como miacutenimo para el uso por ungu-lados

bull En todo caso el solado debe ser de tierra evitaacutendose tanto los sustratos artificiales como el relleno con grava u otros materiales de construccioacuten

bull La revegetacioacuten de los accesos tiene que fa-cilitar la aproximacioacuten de los animales a las embocaduras dando continuidad a los haacutebi-tats que haya en el entorno Para atraer la fauna al entorno de los pasos se recomienda la instalacioacuten de elementos de intereacutes para la misma como charcas o majanos cerca de las embocaduras

bull La revegetacioacuten dentro del paso se ve muy limitada por las condiciones de sombra y se-quedad impuestas por su techo No obstan-te debe facilitarse en lo posible (pe bajo puentes con apertura central junto a un ca-nal de drenaje) el crecimiento de la vegeta-cioacuten al menos herbaacutecea y la lsquonaturalizacioacuten del pasorsquo se puede complementar con la co-locacioacuten de ramas o tocones de aacuterbol en el interior

bull El uso humano y la ocupacioacuten de los pa-sos para diferentes actividades debe evi-tarse mediante una combinacioacuten de ba-rreras adecuadas (pe grandes piedras) y una vigilancia efectiva (Cuadro 3 Figura 9)

bull El procedimiento y tipo de construccioacuten igual que en los pasos inferiores multifuncionales puede decidirse en funcioacuten de las condiciones concretas del proyecto

Figura 8 Dos tipos de adaptaciones para favorecer el traacutensito de la fauna por los pasos superiores multifuncionales la colocacioacuten de tocones de madera (A) y la revegetacioacuten de los laterales (B) Ambos ejemplos proceden de autoviacuteas holandesas

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Figura 9 Distintos disentildeos de pasos inferiores especiacuteficos tipo puente de tableros (A) y abovedado (B)

Las indicaciones generales que se dan para este tipo de estructuras son

bull Se debe cuidar de modo muy preciso su ubi-cacioacuten a fin de maximizar las probabilidades de eacutexito una vez instalados

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Cuadro 3 Uso humano de los pasos especiacuteficos para la fauna

Entre los problemas maacutes frecuentemente detectados en los pasos superiores e inferiores especiacuteficos para fauna se encuentra su utilizacioacuten humana Las actividades humanas detectadas en ellos son extraordinariamente frecuentes y abarcan desde su uso rutinario como lugares para cruzar la infraestructura hasta la apropiacioacuten para diferentes usos

La mayor parte de los pasos construidos para el uso por la fauna acaban siendo utilizados tambieacuten por el hombre en sus desplazamientos Este uso suele incluir siempre el cruce esporaacutedico de peatones pero no es extrantildeo incluso el establecimiento de pistas permanentes en ellos En Espantildea solo en torno a un 45 de los pasos inferiores y un 30 de los pasos superiores de las estructuras disentildeadas especiacuteficamente para fauna disponen de alguacuten tipo de impedimento para evitar el traacutensito de vehiacuteculos

El uso peatonal siempre que no sea intensivo puede considerarse poco relevante para la efectividad de los pasos ya que la mayor parte de los ecosistemas ibeacutericos se encuentran maacutes o menos humanizados y la fauna resulta tolerante a esta coincidencia con el hombre si bien se recomienda controlar la actividad humana en ellos (Clevenger y Waltho 2000) Sin embargo el seguimiento de pasos muestra que es frecuente el uso de los pasos por vehiacuteculos agriacutecolas o de campo (motos quads Figura 10A) que pueden sortear los impedimentos que se ponen a los vehiacuteculos De hecho en algunos lugares en que se habiacutean colocado grandes piedras para dificultar el paso de vehiacuteculos estas aparecen desplazadas labor relativamente sencilla si se dispone de un tractor Por tanto este tipo de uso solo puede ser evitado mediante una vigilancia adecuada y la sancioacuten del uso indebido

Mencioacuten aparte merecen el establecimiento de actividades humanas como el almacenaje de materiales (agriacutecolas de construccioacuten) o el estabulamiento de animales en el interior de los pasos (Figura 10B) Esta ocupacioacuten ilegal del dominio puacuteblico y la perturbacioacuten del uso para el que fueron disentildeados los pasos resulta de todo punto inapropiada y debe perseguirse como parte de las tareas de seguimiento o mantenimiento de las infraestructuras Otro tanto podriacutea decirse del establecimiento de pistas permanentes atravesando los pasos superiores o inferiores originalmente disentildeados para su uso por la fauna

Figura 10 Usos inadecuados que comprometen la efectividad de los pasos inferiores especiacuteficos traacutensito de vehiacuteculos (A) y aprovecha-miento del paso como establo (B)

6 Pasos superiores especiacuteficos para la fauna

Los pasos superiores especiacuteficos son de un modo geneacuterico puentes sobre la infraestructura lineal cuya razoacuten de ser no consiste en permitir el cruce de un camino o carretera sino el de un (supuesto) camino natural de la fauna (Cuadro 4) Bajo esta premisa se han ensayado diferentes tipos de paso superior especiacutefico que pretenden adecuar las caracteriacutesticas de los puentes destinados al uso humano para las peculiaridades de su uso previsto Las principales diferencias nacen de la necesidad de establecer cier-ta cantidad de vegetacioacuten sobre la estructura de un intento de reducir el efecto tuacutenel que pueden per-cibir los animales en el paso y de una disminucioacuten de la perturbacioacuten del paso por el traacutefico que circula bajo eacutel

Las recomendaciones que maacutes comuacutenmente se ha-cen para los pasos superiores especiacuteficos son

bull Como en todos los pasos especiacuteficos se debe prestar una atencioacuten detallada a la ubicacioacuten de modo que se ajuste lo maacutes posible a la existencia de esas rutas propias de los anima-les que se pretende reponer

bull La anchura miacutenima recomendada para estas estructuras es de 20 m no siendo infrecuen-tes dimensiones hasta el doble de este valor pese a su elevado coste

bull El iacutendice de apertura miacutenimo recomendado es de 08 (Cuadro 2)

bull A fin de reducir el efecto tuacutenel que pueden percibir los animales se suelen disentildear con planta en forma de diaacutebolo de modo que la anchura miacutenima se reduce al aacuterea central y los animales tienen una visoacuten maacutes amplia de la salida del paso independientemente del punto por donde lo esteacuten cruzando (Figura 11A)

bull Los accesos deben disentildearse de modo que los perfiles finales sean similares a los del entorno evitando la presencia de pendientes muy pronunciadas que dificulten la visioacuten y el caminar de los animales (Figura 11B)

bull Para atraer la fauna al entorno de los pasos se recomienda la instalacioacuten de elementos de intereacutes para la misma tales como charcas o majanos en los accesos o su entorno

bull Los laterales del paso deben cubrirse con pantallas opacas de 2 m de altura para redu-cir la perturbacioacuten que afecta al aacuterea de uso por los animales principalmente las luces de los coches y el ruido Dichas pantallas suelen construirse mediante tablones o en forma de petos de cemento

bull La revegetacioacuten debe procurar cobertura su-ficiente para que los animales reduzcan su desconfianza a cruzar la infraestructura tanto en los accesos como en el propio paso

bull El grosor miacutenimo de tierra vegetal que debe tener el paso en su parte superior es de 03 m en caso de utilizar plantaciones herbaacuteceas y de 06 m para arbustos

bull En los casos en que no se establezca una cobertura arbustiva en el paso es posible fa-cilitar refugios para la fauna a lo largo del paso acumulando tocones u otros elementos similares

bull Finalizada la construccioacuten deben retirarse to-dos los materiales sobrantes y se deben elimi-nar los caminos utilizados durante la obra para minimizar la frecuentacioacuten humana del paso

bull En todo caso es importante restringir la posi-bilidad de acceso de vehiacuteculos al paso tanto mediante la prohibicioacuten expresa como insta-lando impedimentos a la circulacioacuten Para ello es frecuente la instalacioacuten de grandes piedras espaciadas entre siacute de modo que permitan el paso de los animales pero no de los vehiacuteculos

Entre las recomendaciones anteriores y como ca-racteriacutestica propia de los pasos superiores especiacute-ficos construidos en zonas de clima seco o aacuterido merece la pena comentar brevemente el problema de las revegetaciones La existencia de un periacuteodo prolongado de sequiacutea hace que el mantenimiento de vegetacioacuten lentildeosa en los pasos se encuentre muy limitado por la profundidad del suelo y el agua que puede retener Este hecho se combina con la com-plejidad teacutecnica (y el coste) de realizar estructuras capaces de soportar voluacutemenes de tierra grandes Por ello la posibilidad de realizar plantaciones le-ntildeosas sobre los pasos especiacuteficos es reducida y se encuentra limitada a las situaciones maacutes oacutepti-mas (puentes reforzados para soportar una mayor carga climas subhuacutemedoshellip) En todo caso dado que en los ecosistemas mediterraacuteneos es frecuente la existencia de zonas abiertas el problema no es

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tan grave y la experiencia muestra que los pasos superiores especiacuteficos descubiertos de vegetacioacuten lentildeosa pueden ser utilizados por gran nuacutemero de especies Por tanto en la mayor parte de los casos puede ser maacutes apropiado asumir que la vegetacioacuten sobre el paso va a tener caraacutecter herbaacuteceo (no asiacute los accesos) y disentildear las plantaciones lentildeosas del paso y su entorno de acuerdo con ello

Un elemento maacutes que puede favorecer el uso por la fauna de los pasos superiores especiacuteficos y que se ha observado aunque no experimentado es el esta-blecimiento tras la construccioacuten de plantaciones her-baacuteceas atractivas para los animales Asiacute en Espantildea se ha visto que tanto los lagomorfos como los ungu-lados pueden verse atraiacutedos a los pasos especiacuteficos por la plantacioacuten en ellos de especies pratenses en especial si se mantienen verdes y con porte desarro-llado tras el agostamiento de los pastos naturales del entorno En paralelo en Australia se ha comprobado que el riego durante la estacioacuten seca de los pasos sir-ve para atraer hasta ellos a gran nuacutemero de especies de los ecosistemas adyacentes pudiendo facilitar el uso por los animales de la nueva estructura

Figura 11 Pasos superiores especiacuteficos paso en forma de diaacutebolo construido en un tramo en la provincia de Palencia en la autoviacutea A-231 (A) y otro paso ubicado en el tramo leoneacutes de la autoviacutea A-66 en el que se pueden observar como los accesos son tendidos para favorecer su uso por la fauna (B)

Cuadro 4 Ubicacioacuten de los pasos especiacuteficos para la fauna

Maacutes allaacute de las caracteriacutesticas de la estructura por la que los animales se vean forzados a cruzar las infraestructuras lineales valladas la frecuencia de utilizacioacuten de los pasos de fauna (en sentido amplio) se encuentra estrechamente determinada por las caracteriacutesticas del entorno en que se ubica De nada sirve instalar una estructura especialmente disentildeada para la fauna en un punto al que los animales no pueden acceder por la existencia de impedimentos ajenos a la infraestructura o si las condiciones de haacutebitat del entorno hacen altamente improbable la aproximacioacuten de los animales al mismo Por ambos motivos la ubicacioacuten de estructuras especiacuteficamente disentildeadas para la fauna inevitablemente infrecuentes y con un coste econoacutemico elevado debe tener en cuenta las condiciones del entorno a escala amplia y de detalle La ubicacioacuten de los pasos de fauna en aacutereas que desde una perspectiva espacial amplia sean las maacutes adecuadas para una futura utilizacioacuten por los animales enlaza directamente con la idea de corredores regionales de fauna definidos como las aacutereas de maacutexima probabilidad de uso por un conjunto de taxones para sus desplazamientos por el territorio teniendo en consideracioacuten la existencia de aacutereas nuacutecleo o de maacuteximo intereacutes de conservacioacuten (pe sitios o haacutebitats Red Natura 2000) que alojan las poblaciones a conectar En los uacuteltimos antildeos se han desarrollado de forma intensa los meacutetodos formales de anaacutelisis del territorio desde este punto de vista basados en el uso de sistemas de informacioacuten geograacutefica Aunque dichos sistemas se apoyan en un sustento teoacuterico no del todo comprobado se considera que a diacutea de hoy los modelos de conectividad son la mejor aproximacioacuten posible para la definicioacuten de corredores con una perspectiva amplia (regional o comarcal) Los meacutetodos aplicables son muacuteltiples y el Ministerio de Medio Ambiente y Medio Rural y Marino ha publicado recientemente unas prescripciones acerca de los miacutenimos a tener en cuenta en este sentido en las fases de planificacioacuten y trazado de las infraestructuras (MARM 2010)

Cuadro 4 Ubicacioacuten de los pasos especiacuteficos para la fauna (Continuacioacuten)

Con perspectiva maacutes local a la escala de anteproyecto o proyecto de construccioacuten de una infraestructura la eleccioacuten de la ubicacioacuten y tipo concreto de paso de fauna a instalar debe basarse en una combinacioacuten de anaacutelisis de detalle del entorno combinada con un muestreo de la fauna que utiliza el aacuterea Por una parte los pasos de fauna deben instalarse en los puntos en que aparece el haacutebitat preferido por las especies objetivo siendo necesaria una evaluacioacuten de detalle del mismo (a escala 15000 o superior) Ademaacutes este anaacutelisis tiene que ser complementado con la evaluacioacuten en campo de los haacutebitats de intereacutes y la inexistencia de impedimentos para el movimiento de los animales Asiacute la existencia de vallados muy impermeables entre fincas o el grado de desarrollo de la vegetacioacuten arboacuterea y arbustiva no pueden evaluarse de modo adecuado sin la realizacioacuten de trabajo de campo

A la hora de decidir a pequentildea escala la ubicacioacuten y tipologiacutea de un paso de fauna se pueden tener en cuenta las caracteriacutesticas del paisaje que condicionan el movimiento de los animales Se sabe que la topografiacutea condiciona los desplazamientos de modo que los recorridos que suelen realizar los animales reflejan una combinacioacuten de la optimizacioacuten entre la distancia a recorrer y la facilidad de movimiento en el recorrido En este contexto evitar la existencia de pendientes grandes resulta evidente pero no lo es tanto que los animales acaben utilizando el entorno de los fondos de valle y las hombreras de las lomas en parte precisamente como respuesta al mismo proceso De hecho la sabiduriacutea popular (cinegeacutetica principalmente) apunta a que las vaguadas son en general maacutes utilizadas por la fauna que las partes altas y ello puede apoyar la eleccioacuten prioritaria de la solucioacuten lsquopaso inferiorrsquo en situaciones en que sea posible elegir entre la ubicacioacuten de una estructura sobre o bajo la viacutea No obstante otra parte muy relevante de las claves que usan los animales para desplazarse por el territorio depende de elementos maacutes o menos evidentes del haacutebitat lo que aconseja hacer una prospeccioacuten visual intensiva de los haacutebitats del entorno asiacute como una buacutesqueda de trochas y evidencias del uso por vertebrados a la hora de decidir acerca de la (elevada) inversioacuten en un paso especiacutefico para la fauna

7 Ecoductos

Los ecoductos son estructuras construidas sobre la viacutea para facilitar el cruce de la fauna y que por sus caracteriacutesticas se asemejan a un tuacutenel (Figura 12A) De hecho su principal diferencia con los pasos su-periores especiacuteficos es que sus grandes dimensio-nes y la capacidad de establecer vegetacioacuten sobre ellos permiten una oacuteptima integracioacuten en el entorno Dado el elevadiacutesimo coste de estas estructuras en ellas son de aplicacioacuten la praacutectica totalidad de las indicaciones presentadas anteriormente para los di-ferentes tipos de estructuras adecuadas a la fauna y de modo destacado

bull Su ubicacioacuten debe ser especialmente estudia-da y debe asegurarse una continuidad ade-cuada del futuro corredor de fauna con los haacutebitats del entorno

bull Su anchura miacutenima debe ser de al menos 80 m siendo deseable ampliar este valor en la medi-da de lo posible a fin de asegurar la existencia

de cierta cantidad de haacutebitat poco perturbado en el aacuterea central del paso

bull Se deben disponer pantallas opacas de unos 2 m de altura en los laterales del paso

bull El aislamiento respecto del ruido del traacutefico debe asegurarse mediante motas de tierra la-terales de al menos 1 m de altura

bull La revegetacioacuten debe orientarse a reconstruir haacutebitats muy similares a los existentes en el entorno habieacutendose definido como groso-res miacutenimos de tierra vegetal a utilizar 03 m para plantaciones herbaacuteceas 06 m para arbustos y 15 m para aacuterboles

bull Se recomienda realizar plantaciones heterogeacute-neas sobre el ecoducto (Figura 12B) con es-pacios abiertos en los sectores centrales para que los animales tengan buena visibilidad del extremo contrario del paso y plantaciones maacutes densas de aacuterboles y arbustos en los laterales

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Figura 12 Ecoducto de tipo falso tuacutenel construido en un tramo de la provincia de Caacuteceres de la autoviacutea A-66 (A) Y detalle de la revegetacioacuten realizada en el interior del paso (B)

La teacutecnica de construccioacuten maacutes habitual consis-te en la generacioacuten de falsos tuacuteneles mediante la construccioacuten de boacutevedas y su cubricioacuten posterior si bien la utilizacioacuten de teacutecnicas de construccioacuten de tuacuteneles seriacutea maacutes deseable allaacute donde sea posible para minimizar los impactos sobre el aacuterea En rela-cioacuten con la teacutecnica de construccioacuten debe tenerse en cuenta que la instalacioacuten de falsos tuacuteneles obli-ga a acumular temporalmente grandes voluacutemenes de material de relleno y necesita el desarrollo de obras muy impactantes con abundante maquina-ria pesada en el lugar de la construccioacuten Ambos hechos deben tenerse en cuenta a la hora de pla-nificar una de estas estructuras en especial si van a ubicarse en lugares de alto valor natural Como contrapartida en algunas ocasiones los falsos tuacute-neles sirven como ubicacioacuten para el vertido de ma-teriales excedentes de otras partes (proacuteximas) del trazado en especial cuando se disentildean en paisajes llanos en los que el falso tuacutenel no se ubique en el lugar en que anteriormente existiacutea una loma

Una uacuteltima recomendacioacuten se centra en la necesi-dad de asegurar la pervivencia a largo plazo de la funcionalidad del ecoducto y su mantenimiento al margen de actividades humanas impactantes Para ello idealmente estas estructuras deberiacutean ubicarse siempre en terrenos cuya integridad a largo plazo pueda asegurarse y de modo prioritario sobre zonas de propiedad puacuteblica que aseguren el mantenimien-to de un aacuterea superior a la habitual de expropiacioacuten Otras aacutereas potencialmente interesantes pueden ser grandes fincas sin vallados interiores y que por su utilizacioacuten (pe caza mayor) permitan suponer que no se van a dividir En todo caso deberiacutean esta-blecerse normas para asegurar que el ecoducto y su entorno se mantengan libres de perturbacioacuten de forma maacutes o menos permanente

8 Viaductos

Los viaductos son estructuras de grandes dimen-siones que sirven para que la infraestructura atra-viese vaguadas del terreno y que regularmente se han exigido durante la construccioacuten de carreteras y ferrocarriles para afectar miacutenimamente las aacutereas atravesadas y para facilitar la conectividad del te-rritorio Hasta hace relativamente poco tiempo no se habiacutea registrado cientiacuteficamente su nivel de per-meabilidad para la fauna (Kusak et al 2009) que responde a la percepcioacuten de ellos como estructuras muy permeables y por lo tanto altamente reco-mendables

En el disentildeo y ejecucioacuten de los viaductos cuando se persigan objetivos de conservacioacuten debe prestarse atencioacuten prioritaria a la conservacioacuten de los haacutebitats situados bajo la estructura La construccioacuten de estas estructuras requiere el acceso y trabajo de la maqui-naria pesada como miacutenimo en los puntos en que se asientan las pilas De hecho si no hay indicaciones en contra el procedimiento rutinario de construc-cioacuten pasa por la realizacioacuten de viacuteas de servicio bajo el futuro viaducto que alcanzan la mayor parte de la superficie del mismo Por este motivo cuando se pretende proteger los haacutebitats que van a quedar bajo el viaducto suele exigirse

bull La construccioacuten de la plataforma mediante teacutecnicas miacutenimamente invasivas del fondo del valle (cimbras autoportantes o tableros empu-jados) aunque ello represente un sobrecoste relevante

bull La limitacioacuten en el nuacutemero o ubicacioacuten de los apoyos

bull El trabajo independiente desde ambos lados del valle de modo que se respete la integri-dad del riacuteo y la vegetacioacuten de ribera circun-dante prohibiendo especiacuteficamente la cons-truccioacuten de pistas o vados temporales que los afecten

Aunque las dimensiones de los viaductos suelen ser grandes sobrepasando holgadamente las necesida-des detectadas por los caacutelculos hidraacuteulicos es fre-cuente el establecimiento de indicaciones como

bull El respeto de los cauces la vegetacioacuten de ri-bera y un entorno general de 10 m de los lu-gares de mayor valor siempre que sea posible

bull Nunca ubicar estribos de los viaductos o pilas en el cinturoacuten de vegetacioacuten de ribera ni a menos de 5 m de eacutel

bull Mantener siempre que sea posible una altu-ra tal que no se rompa la continuidad de la vegetacioacuten de ribera y en ninguacuten caso una altura sobre el suelo inferior a 5 m en caso de vegetacioacuten herbaacutecea o arbustiva y 10 m en zonas arboladas

Ya que los viaductos junto a los tuacuteneles son los uacutenicos tramos en que se mantiene la continuidad del paisaje atravesado por la infraestructura en ellos y su entorno se deben extremar las medidas de vigilancia y control de los usos del suelo con el objetivo uacuteltimo de preservar su adecuacioacuten para la fauna Dado que en estas aacutereas son de aplicacioacuten las

normas sobre expropiacioacuten de terrenos y control de actividades en el entorno de infraestructuras existen mecanismos para segurar la consecucioacuten de dicho objetivo

9 Otros

Pasos aeacutereos entre aacuterboles para especies arboriacutecolas

Este tipo de dispositivos se han construido y com-probado su eacutexito para los marsupiales arboacutereos de Australia (Taylor y Goldingay 2009) En Espantildea se recomienda su utilizacioacuten en aquellos lugares donde existan poblaciones de ardilla si bien se ha compro-bado coacutemo estas especies tambieacuten pueden utilizar pasos inferiores adaptados para la fauna y espe-cialmente aquellos de disentildeo especiacutefico (Figura 13)

Figura 13 Ardilla roja cruzando por un paso inferior especiacutefico de la autoviacutea A-40 (Cuenca)

IV EacuteXITOS Y FRACASOS

Ante este conjunto de actuaciones propuestas y desde la perspectiva obtenida tras varias deacutecadas de experiencias internacionales en este aacutembito sur-gen diversas preguntas que merece la pena plantear en este punto iquestse puede considerar exitosa la apli-cacioacuten de las medidas correctoras de la fragmenta-cioacuten de haacutebitats por infraestructuras lineales presen-tadas iquestqueacute evidencias existen de su efectividad La contestacioacuten de estas preguntas de forma sinteacutetica si bien con una inevitable peacuterdida de matices se aborda en los siguientes paacuterrafos Paacuterrafos en los que se pretende mostrar el gran avance que se ha producido en Espantildea en el campo de la restaura-cioacuten ecoloacutegica de los efectos de fragmentacioacuten ge-nerados por las infraestructuras lineales y algunas

lagunas existentes auacuten hoy A fin de tener una visioacuten relativamente completa del tema se abordan las tres perspectivas que delimitan la puesta en marcha de soluciones reales a un problema en el que conflu-yen aspectos administrativos teacutecnicos y cientiacuteficos

En primer lugar debe destacarse que en el plano ad-ministrativo y formal de los procesos de evaluacioacuten de impacto ambiental (EIA) a que se someten los proyectos de nuevas infraestructuras se ha integra-do de forma bastante soacutelida la atencioacuten al problema de la fragmentacioacuten de poblaciones fauniacutesticas Y en este plano se estaacuten dando pasos en la direccioacuten adecuada Asiacute las administraciones ambientales en general y el Ministerio de Medio Ambiente y Medio

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Rural y Marino en particular llevan antildeos exigiendo la adopcioacuten de medidas contra la fragmentacioacuten de haacutebitats en las declaraciones de impacto ambiental (DIA) de carreteras y ferrocarriles Ademaacutes se han publicado una serie de documentos con intencioacuten prescriptiva en los que se sientan las bases de coacutemo actuar correctamente durante las fases de planifica-cioacuten construccioacuten y explotacioacuten de las viacuteas (MMA 2006 MMARM 2008 y MMARM 2010) Dichos docu-mentos estaacuten siendo aplicados caso por caso a los nuevos proyectos sometidos a EIA de forma que la exigencia de su uso en las DIA resulta equivalente para cada proyecto individual a la existencia de una norma superior que los hiciese prescriptivos para to-dos los proyectos El uacuteltimo documento ademaacutes se enfoca tambieacuten a las fases de planificacioacuten someti-das a evaluacioacuten ambiental estrateacutegica

Como contrapunto a este optimismo deben sentildea-larse al menos dos elementos que atantildeen a la aten-cioacuten desde las Administraciones a la fragmentacioacuten de poblaciones por las nuevas infraestructuras de transporte Por un lado la experiencia de las uacuteltimas dos deacutecadas muestra que el avance en este tema no es continuo ni puede darse ya por consolidado definitivamente Asiacute algunos proyectos relativamen-te nuevos se han desarrollado con una atencioacuten a la fragmentacioacuten de poblaciones inferior a la que se habiacutea aplicado (por la misma Administracioacuten) a casos anteriores El hecho de que el tratamiento se desarrolle caso a caso y dependiente de la redac-cioacuten de la DIA correspondiente hace que todos los sectores involucrados deban mantenerse vigilantes ante la aprobacioacuten de nuevos proyectos Por otro

lado cada vez se detecta con mayor intensidad la necesidad de reforzar los procedimientos de vigilan-cia y seguimiento de los proyectos aprobados ya que auacuten son frecuentes cambios sobrevenidos en estos incluso el ahorro de partidas destinadas a me-didas correctoras En este sentido deben destacarse la falta de recursos de las Administraciones ambien-tales para desarrollar adecuadamente el control ne-cesario y la praacutectica inexistencia de procedimientos formales de seguimiento a largo plazo

En segundo lugar desde una perspectiva teacutecnica se puede decir que las publicaciones referidas anterior-mente sirven de instrumento uacutetil para la redaccioacuten de los proyectos La acogida de este tipo de docu-mentos es en general buena como lo viene siendo desde la primera publicacioacuten espantildeola sobre el tema (Velasco et al 1995) En este plano los retos que se enfrentan para el futuro consisten por un lado en una adecuada aplicacioacuten de las prescripciones teacutec-nicas a cada caso concreto evitaacutendose la aplicacioacuten de las indicaciones existentes en estos documentos como recetas uacutenicas y definitivas En concreto la reduccioacuten de costes en la elaboracioacuten de los proyec-tos lleva incluso a omitir las ineludibles visitas de campo que deberiacutean guiar el disentildeo de detalle de las medidas correctoras de la fragmentacioacuten de po-blaciones de fauna Por otro lado auacuten es escasa la integracioacuten de los equipos ambientales y de disentildeo durante la gestacioacuten de los proyectos que permitiriacutea optimizar el trabajo y con cierta frecuencia se le otorga poca importancia al trabajo de los teacutecnicos ambientales durante el desarrollo de los proyectos En este uacuteltimo campo no obstante se ha avanzado mucho en los uacuteltimos antildeos

En tercer lugar la experiencia cientiacutefica acumulada en los uacuteltimos antildeos permite asegurar que el esfuerzo desarrollado por administraciones y teacutecnicos no es en balde en general las actuaciones propuestas sir-ven para la funcioacuten baacutesica para la que se disentildearon el cruce de las infraestructuras por los vertebrados De forma resumida se puede decir que en los luga-res en que se ha realizado un seguimiento cientiacutefico de las estructuras transversales a la viacutea se ha detec-tado el cruce de la praacutectica totalidad de las especies de vertebrados presentes en el entorno (Yanes et al 1995 Rodriacuteguez et al 1996 Rosell et al 1997 Peris y Morales 2004 Mata et al 2005 Mata et al 2006 Ascensatildeo y Mira 2007 Mata 2007 Grilo et al 2008 Llorente y Diacuteez 2008)

En general las estructuras transversales a las infraes-tructuras lineales resultan complementarias entre siacute en cuanto a los animales que las utilizan para cruzar

Eje

Y+

+

-

-

conejos y

liebres

ungulados

DA

PSM

PIM

DC

PIE

PSE

garduntildea

anfibios

laceacuteridos

ratonesturoacuten

gato

tejoacuten

zorro

perro

jineta

Eje X

Figura 15 Representacioacuten graacutefica en la que se sintetizan los resultados procedentes del seguimiento de 113 estructuras de la autoviacutea A-52 Se muestra la ubicacioacuten relativa en un plano obtenida mediante teacutecnicas multivariantes de ordenacioacuten de las especiesgrupos fauniacutesticos en relacioacuten con su utilizacioacuten de los diferentes tipos de pasos DA drenaje adecuado DC drenaje circular PIE paso inferior especiacutefico PIM paso inferior multifuncional PSE paso superior especiacutefico PSM paso superior multifuncional (Fuente figura adaptada de Mata 2007)

Figura 14 Jabaliacute (Sus scrofa) atropellado en la carretera N-110 (Aacutevila)

(Figura 15) La fauna que utiliza los diferentes tipos de pasos es distinta reflejando cierta relacioacuten directa entre el tamantildeo del animal y las dimensiones de las estructuras utilizadas (Veenbass y Brandjes 1999 Ng et al 2004 Mata et al 2005) Asiacute los drenajes son preferentemente utilizados por pequentildeos musteacutelidos anfibios reptiles y micromamiacuteferos (ratones musa-rantildeas y topillos) mientras que los pasos superiores e inferiores maacutes amplios son con mayor frecuencia

utilizados por musteacutelidos medianos como la garduntildea y el tejoacuten asiacute como por conejos y liebres jinetas zo-rros lobos y ungulados (jabaliacute corzo y ciervo)

Por otra parte la frecuencia relativa de uso de los diferentes tipos de estructuras es bastante similar con excepcioacuten de los drenajes de seccioacuten redonda que muestran iacutendices de uso inferiores al resto de tipos de paso (Figura 15)

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Figura 15 Utilizacioacuten relativa de cada tipo de estructura por la fauna representada mediante iacutendices de uso relativo (iacutendice de uso = 1 cuando la utilizacioacuten observada = utilizacioacuten esperada) Los resultados proceden del seguimiento de 113 estructuras de la autoviacutea A-52 DA drenaje adecuado DC drenaje circular n nuacutemero de estructuras controladas PIE paso inferior especiacutefico PIM paso inferior multifuncional PSE paso superior especiacutefico PSM paso superior multifuncional (Fuente figura adaptada de Mata 2007)

Una mencioacuten especial merecen los pasos especiacutefi-camente disentildeados o adaptados para la fauna ya que se ha comprobado su capacidad para facilitar el cruce de especies que no lo hacen por otras estructuras siendo especialmente llamativo para el caso de los ungulados Son numerosos los pro-gramas de seguimiento desarrollados en Espantildea en los que ha quedado reflejado el escaso nuacute-mero de registros obtenidos para estas especies que parecen cruzar de forma muy esporaacutedica las infraestructuras y que lo hacen de forma praacutectica-mente exclusiva a traveacutes de pasos especiacuteficamen-te disentildeados para la fauna (Rodriacuteguez et al 1996 Rosell et al 1997 Navas y Rosell 2002 Mata et al 2006 Llorente y Diacuteez 2008) Ademaacutes en teacuterminos generales se ha comprobado coacutemo la frecuencia de uso de los pasos especiacuteficos es entre 15 y 3 veces mayor en los de disentildeo especiacutefico para la fauna frente a los de tipo funcional de la viacutea de si-milar ubicacioacuten respecto a la infraestructura (Mata et al 2008)

En el contexto de la Peniacutensula Ibeacuterica mencioacuten especial requiere otra especie que se muestra renuente a utilizar los pasos de fauna la tortuga mora Por el momento en el uacutenico seguimiento realizado en una autoviacutea que atravesaba aacutereas con presencia de esta especie no se constatoacute ninguacuten cruce (Botella P comentario personal)

En su conjunto los resultados obtenidos hasta el momento indican que los pasos especiacuteficamente di-sentildeados para la fauna y las estructuras funcionales propias de la viacutea (drenajes puentes y pasos inferio-res) contribuyen a incrementar la permeabilidad de las infraestructuras manteniendo asiacute la conectividad del paisaje En concreto un elemento clave para ase-gurar el eacutexito de estas medidas es la incorporacioacuten de adaptaciones para favorecer su uso por la fauna en todas o buena parte de las estructuras funciona-les de una viacutea suponiendo un sobrecoste que debe ser contemplado como necesario e imprescindible si se pretende reducir la fragmentacioacuten de haacutebitats causada por las infraestructuras de transporte

V CONCLUSIONES Y PERSPECTIVAS

En conclusioacuten se puede decir que la restauracioacuten de las aacutereas afectadas por infraestructuras lineales enfocada a minimizar los efectos de la fragmenta-cioacuten de poblaciones animales se encuentra ya bas-tante consolidada y es relativamente exitosa No obstante pecariacuteamos de optimistas si obviaacuteramos la existencia de grandes vaciacuteos en el conocimiento del tema y nos conformaacuteramos con mantener el statu quo actual de conocimiento y actuacioacuten alcanzados tras poco maacutes de 10 antildeos desde la instalacioacuten de los primeros pasos de fauna en ecosistemas medi-terraacuteneos Ecosistemas que ocupan la mayor parte de la Peniacutensula Ibeacuterica y para los que hay escasas experiencias fuera de ella

Asiacute es necesario reconocer que el conocimiento cientiacutefico actual se centra en el uso de las estruc-turas por los vertebrados (y la impermeabilidad del vallado) pero apenas se ha podido analizar auacuten la efectividad real de dichas actuaciones sobre las po-blaciones animales La constatacioacuten de que cierto nuacutemero de individuos de cualquier especie cruza una infraestructura a traveacutes de los pasos de fau-na no asegura que dicho flujo sea suficiente para mantener a largo plazo la viabilidad de las pobla-ciones yo dinaacutemicas de colonizacioacuten-extincioacuten que permitan asegurar la restauracioacuten de una situacioacuten similar a la previa al proyecto (o cuando menos es-table a largo plazo) Es maacutes la praacutectica totalidad de los anaacutelisis realizados hasta el momento no han abordado la distincioacuten individual de los individuos detectados cruzando los ferrocarriles o carreteras lo que complica auacuten maacutes la evaluacioacuten de cuaacutel es la frecuencia de cruce que podriacutea considerarse miacutenima para asegurar la eficacia de la restauracioacuten Con esta perspectiva en los uacuteltimos tiempos se ha empezado a demandar un anaacutelisis detallado de los efectos po-sitivos de los pasos de fauna en el mantenimiento de la conectividad geneacutetica de las poblaciones (Ba-lkenhol y Waits 2009 Corlatti et al 2009) Sin em-bargo la relativa juventud de estas estructuras hace difiacutecil la deteccioacuten de efectos sobre la variabilidad geneacutetica y maacutes auacuten de cambios geneacuteticos con un reflejo directo en las probabilidades de superviven-cia de las poblaciones De hecho auacuten hoy son es-casos los estudios que demuestran la existencia de fragmentacioacuten geneacutetica de poblaciones asociada a la presencia de infraestructuras de transporte (Riley et al 2006 Malo y Mata 2010)

Desde una perspectiva maacutes amplia el objetivo a perseguir deberiacutea trascender el mantenimiento de

poblaciones estables para alcanzar el maacutes ambi-cioso (y difuso) de asegurar la restauracioacuten de las interacciones entre especies y el mantenimiento de unas lsquocondiciones ecoloacutegicas establesrsquo En una pri-mera aproximacioacuten se pretenderiacutea que las medidas de permeabilidad de las infraestructuras consiguie-ran eliminar la barrera que representa el proyecto y desapareciera todo efecto de fragmentacioacuten del ecosistema Este objetivo representa un nivel de am-bicioacuten de la restauracioacuten ecoloacutegica que trasciende el aproximado hasta el momento desde el punto de vista del conocimiento cientiacutefico y deberiacutea abordar-se desde el marco conceptual de la aparicioacuten de un lsquoecosistema emergentersquo en el entorno de la infraes-tructura lineal Este nuevo ecosistema nunca podraacute ser igual al preexistente en el lugar dado el cambio de condiciones que inevitablemente conlleva la pre-sencia y utilizacioacuten de la carretera o la viacutea feacuterrea

Todo ello deriva hacia el segundo gran tema y efec-to de las infraestructuras lineales sobre el territorio la degradacioacuten de haacutebitats Algunas investigaciones recientes muestran la aparicioacuten de efectos muacuteltiples en las poblaciones e interacciones entre especies en estos ecosistemas (pe Goerlitz y Siemers 2007 Francis et al 2009 Ruiz-Capillas et al 2009) que invitan a pensar en la inevitable degradacioacuten de su entorno No obstante partiendo de la necesidad de este tipo de infraestructuras puede ser maacutes uacutetil aproximarse al problema desde una perspectiva po-sitivista (o posibilista) reduacutezcanse los efectos nega-tivos y traacutetese de aprovechar los que puedan llegar a ser positivos En este contexto seriacutea necesario es-clarecer cuaacuteles son los principales cambios en estos ecosistemas emergentes a fin de detectar queacute actua-ciones pueden llevarse a cabo para que la presencia del ecosistema de entorno de la infraestructura en-torpezca en el menor grado posible el funcionamien-to de aquellos otros en los que se inserta

Mientras no dispongamos de un conocimiento ade-cuado para actuar proactivamente en la direccioacuten de manejar dicho ecosistema emergente el sentido comuacuten y la aplicacioacuten del principio de precaucioacuten debe servir para dirigir los esfuerzos encaminados a proteger la fauna afectada por nuestras infraes-tructuras En primer lugar se deben minimizar los efectos del desarrollo de nuevos proyectos tanto en el espacio como en el tiempo mediante una plani-ficacioacuten adecuada de las actuaciones y su ejecucioacuten con las teacutecnicas menos impactantes que resulten factibles Ademaacutes debe trabajarse para conseguir la

DC (n = 42) DA (n = 16) PIM (n = 21) PIE (n = 8) PSM (n = 22) PSE (n = 4)

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maacutexima integracioacuten del nuevo proyecto con el en-torno atendiendo tanto a la fauna como al resto de elementos del medio bioacutetico y abioacutetico que se tratan en este manual Y por uacuteltimo las actuacio-nes que se planteen deben disentildearse ejecutarse y mantenerse con una perspectiva temporal de largo plazo La experiencia proacutexima nos muestra la (des-graciada) frecuencia con la que se ponen en marcha iniciativas bien encaminadas que nunca alcanzan las metas propuestas Y no lo hacen porque el plazo en que estas se alcanzariacutean es muy superior al que tar-damos en hacerlas descarrilar por accioacuten u omisioacuten Asiacute ya se estaacuten dando casos en que estructuras di-sentildeadas para ejercer de pasos de fauna sabiamente ubicadas en supuestos corredores de fauna son re-convertidas como pasos de nuevas carreteras iquestTan necesarias eran dichas estructuras si apenas cinco antildeos despueacutes estamos dispuestos a eliminarlas

Para terminar y mirando hacia el futuro cabe plantearse una nueva cuestioacuten iquestqueacute ocurre con las infraestructuras antiguas Este es un tema

que empieza a plantearse y sobre el que algunos paiacuteses lsquoavanzadosrsquo han empezado a trabajar Tal y como se ha comentado la atencioacuten a los pro-blemas de fragmentacioacuten de poblaciones animales se ha desarrollado en las uacuteltimas deacutecadas y para entonces las redes baacutesicas de carreteras y ferro-carriles ya se encontraban construidas Aunque buena parte de ellas no estaba vallada el efecto de fragmentacioacuten que pueden estar ejerciendo auacuten no ha sido evaluado si bien podriacutea ser destaca-ble (Malo y Mata 2010) Ante esta situacioacuten paiacuteses con mayor experiencia en el desarrollo de infraes-tructuras de transporte (Estados Unidos Holanda) estaacuten iniciando ya programas de desfragmentacioacuten del territorio mediante la aplicacioacuten de teacutecnicas como las que se indicaban en los apartados ante-riores para proyectos nuevos En breve nuestras autoridades ambientales empezaraacuten a trabajar en ello y a largo plazo seraacute necesario invertir en ella el dinero que no se haya invertido acertadamente ahora Y se haraacute con el sobrecoste de toda actua-cioacuten a posteriori

INSECTOS

Este capiacutetulo de fauna recoge la problemaacutetica de los vertebrados un grupo fauniacutestico muy atrac-tivo pero minoritario Desgraciadamente ha quedado fuera el grupo de los invertebrados (in-sectos arantildeas lombrices caracoles etc) cuyo papel en el funcionamiento de los ecosistemas es cuantitativa y cualitativamente mucho ma-yor que el de los vertebrados Esta omisioacuten se debe en gran medida a que solo algunos grupos

nacionales desde fechas muy recientes trabaja en el aacutembito de invertebrados y carreteras no asiacute en otros paiacuteses como en el caso de Finlandia donde se han realizado diversos trabajos

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9Seguimiento y vigilancia ambiental

Carlos Iglesias Santiago Soliveres Valentiacuten Alfaya Jesuacutes Aacutelvarez Ignacio Mola Javier Martiacutenez de Castilla y Xavier Artigas

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CAPIacuteTULO 9 Seguimiento y vigilancia ambiental

Carlos Iglesias Santiago Soliveres Valentiacuten Alfaya Jesuacutes Aacutelvarez Ignacio Mola Javier Martiacutenez de Castilla y Xavier Artigas

I INTRODUCCIOacuteN Y ANTECEDENTES

1 Introduccioacuten y marco general

La vigilancia ambiental en proyectos de infraestruc-turas de transporte se enmarca generalmente en un escenario definido por la evaluacioacuten de impacto ambiental (EIA) de los mismos Salvo en aquellos casos en los que la construccioacuten de una infraestruc-tura nueva no queda sometida a este procedimiento bien porque no corresponda con los previstos en los anexos de la norma correspondiente o maacutes ex-cepcionalmente auacuten quede exenta por una ley del Estado o por un acuerdo del consejo de gobierno de una comunidad autoacutenoma en las situaciones en las que la competencia corresponda a estas uacuteltimas

En el actual marco legislativo los programas de vigi-lancia ambiental (PVA) son documentos de caraacutecter obligatorio dentro del procedimiento de EIA y han de servir para establecer el sistema que garantice el cum-plimiento de las indicaciones y medidas protectoras correctoras y compensatorias si proceden conteni-das en el estudio de impacto ambiental (EsIA) tanto en lo referente a su ejecucioacuten como a su eficacia

El oacutergano ambiental evaluacutea el EsIA del proyecto (en el caso de las infraestructuras de transporte suele coincidir con su fase de estudio informativo) tras haberse sometido a informacioacuten puacuteblica y formula la declaracioacuten de impacto ambiental (DIA) En caso de que la DIA sea positiva fija las condiciones de caraacutecter ambiental que deben incorporarse en la or-den de aprobacioacuten del proyecto traacutemite con el cual

concluye el procedimiento de EIA Estas condiciones suelen establecer medidas adicionales a las previs-tas en el EsIA

Tanto la DIA como el conjunto de documentacioacuten generada durante el procedimiento de EIA se con-vierten en piezas baacutesicas para la redaccioacuten del pro-yecto constructivo ya que debe contemplar lo que establecen e incluir un PVA que sirva para controlar la ejecucioacuten de las obras y al menos los primeros antildeos de funcionamiento

El seguimiento y vigilancia ambiental sin diferenciar entre ambos conceptos se trata en el Real Decreto Legislativo 12008 (BOE nordm 23 de 26 de enero de 2008) modificado por la Ley 62010 (BOE nordm 73 de 25 de marzo de 2010) como se reproduce en el Cua-dro 1 En el Capiacutetulo III dedicado al control del cum-plimiento de la DIA se conciben como la herramienta que permite verificar la aplicacioacuten de las medidas pre-ventivas correctoras y cuando proceda compensato-rias durante la ejecucioacuten y fase de explotacioacuten de un proyecto sometido al procedimiento de EIA

Cuadro 1 Seguimiento y Vigilancia en el RDL 12008

Artiacuteculo 18 Seguimiento y vigilancia del cumpli-miento de la DIA

1 Corresponde al oacutergano sustantivo o a los oacuterganos que en su caso designen las comunidades autoacutenomas respecto de los proyectos que no sean de competencia estatal el seguimiento y vigilancia del cumplimiento de la declaracioacuten de impacto ambiental Sin perjuicio de ello el oacutergano ambiental podraacute recabar informacioacuten de aquel al respecto asiacute como efectuar las comprobaciones necesarias para verificar el cumplimiento del condicionado

2 El oacutergano sustantivo comunicaraacute al oacutergano ambiental el comienzo y el final de las obras asiacute como el comienzo de la fase de explotacioacuten

En la actualidad la legislacioacuten baacutesica en materia de EIA sufre la paradoja de que el Reglamento que la desarrolla el RD 11311988 (BOE nordm 239 de 5 de octubre de 1988) es anterior al RDL 12008 y a la Ley 62010 de modificacioacuten del texto refundido de la Ley de Evaluacioacuten de Impacto Ambiental de pro-yectos aprobado por el citado RDL 12008

La lectura del RD 11311988 permite observar que tampoco en este caso se diferencia entre las ta-reas de seguimiento y vigilancia aunque los ob-jetivos de esta uacuteltima tratan de forma especiacutefica de

1 Velar para que en relacioacuten con el medio am-biente la actividad se realice seguacuten el proyec-to y seguacuten las condiciones en que se hubiere autorizado

2 Determinar la eficacia de las medidas de pro-teccioacuten ambiental contenidas en la declara-cioacuten de impacto

3 Verificar la exactitud y correccioacuten de la evalua-cioacuten de impacto ambiental realizada

Debido a la organizacioacuten administrativa del Estado algunas comunidades autoacutenomas han establecido en sus respectivas normas que el desarrollo de la vigilancia ambiental seraacute responsabilidad de la consejeriacutea competente en materia de medio am-biente como en los casos de Andaluciacutea y Madrid Circunstancia que ha obligado a matizar la redac-cioacuten del artiacuteculo 18 punto 1 del RDL 12008 res-pecto a lo que se contemplaba en el artiacuteculo 25 punto 1 del RD 11311988 (Cuadro 2) auacuten vigente salvo en los aspectos que contradiga al primero y su posterior modificacioacuten No obstante en la ma-yoriacutea de comunidades autoacutenomas como Canarias Castilla-La Mancha Castilla y Leoacuten Cataluntildea Ga-licia etc se ha trasladado el esquema baacutesico de funcionamiento del Estado siendo la verificacioacuten del cumplimiento de la DIA competencia del oacutergano sustantivo sin perjuicio de la facultad del oacutergano ambiental para recabar la informacioacuten que requiera para verificar dicho cumplimiento aunque tambieacuten el desarrollo legislativo ha dado lugar a la creacioacuten de diferentes procedimientos de autorizacioacuten am-biental de proyectos y actividades en algunas auto-nomiacuteas que en funcioacuten de sus caracteriacutesticas o las del emplazamiento del proyecto pueden ocasionar que dicha responsabilidad recaiga sobre el oacutergano sustantivo o sobre el oacutergano ambiental como por ejemplo sucede en Aragoacuten en funcioacuten del tipo de tramitacioacuten que corresponda

Un caso maacutes singular de funcionamiento es el de las Islas Baleares donde su legislacioacuten establece que en funcioacuten del importe del presupuesto del proyec-to o la concurrencia de circunstancias que lo justi-fiquen dicha responsabilidad puede recaer directa-mente sobre una auditoriacutea externa contratada por el propio promotor

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Cuadro 2 Vigilancia y responsabilidad (RD 11311988)

Artiacuteculo 25 Oacuterganos que deben hacerla1 Corresponde a los oacuterganos competentes por razoacuten de la materia facultados para el otorga-miento de la autorizacioacuten del proyecto el segui-miento y vigilancia del cumplimiento de lo esta-blecido en la declaracioacuten de impacto ambiental Sin perjuicio de ello el oacutergano administrativo de medio ambiente podraacute recabar informacioacuten de aquellos al respecto asiacute como efectuar las comprobaciones necesarias para verificar dicho cumplimiento2 El seguimiento y vigilancia por los oacuterganos que tengan competencia sustantiva deben ha-cer posible y eficaz los que ejerzan los oacuterganos administrativos de medio ambiente que podraacuten alegar en todo momento el necesario auxilio administrativo tanto para recabar informacioacuten como para efectuar las comprobaciones que consideren necesarias

Artiacuteculo 26 Objetivos de la vigilanciaLa vigilancia del cumplimiento de lo estableci-do en la declaracioacuten de impacto tendraacute como objetivos a Velar para que en relacioacuten con el medio am-

biente la actividad se realice seguacuten el proyec-to y seguacuten las condiciones en que se hubiere autorizado

b Determinar la eficacia de las medidas de pro-teccioacuten ambiental contenidas en la declara-cioacuten de impacto

c Verificar la exactitud y correccioacuten de la evalua-cioacuten de impacto ambiental realizada

Debido al uso frecuente de acroacutenimos en la materia tratada en este capiacutetulo antes de finalizar el aparta-do de introduccioacuten se considera conveniente incluir el siguiente cuadro resumen

Cuadro 3 Resumen de siglas y acroacutenimos

CMCC Comisioacuten Mixta de Concertacioacuten y Control

DAO Direccioacuten ambiental de obra

DIA Declaracioacuten de impacto ambiental

EIA Evaluacioacuten de impacto ambiental

EsIA Estudio de impacto ambiental

I+D+i Investigacioacuten + Desarrollo + innovacioacuten

PAC Programa de aseguramiento de la calidad

PEM Presupuesto de ejecucioacuten material

PPI Programa de puntos de inspeccioacuten

PS Programa de seguimiento

PVA Programa de vigilancia ambiental

2 Objeto y alcance del capiacutetulo

El presente capiacutetulo pretende no solo establecer las pautas lsquoteacutecnicasrsquo de seguimiento de las distintas varia-bles y elementos ambientales sino tambieacuten proponer un marco maacutes ambicioso para la articulacioacuten de los programas de vigilancia ambiental en proyectos de infraestructuras a partir de las deficiencias habitual-mente detectadas Una articulacioacuten que entre otros objetivos permita aclarar las responsabilidades de los distintos agentes y facilitar que los responsables de cada fase doten los recursos necesarios para una aplicacioacuten eficiente de los programas de vigilancia en obra y seguimiento a largo plazo

Por un lado se entiende que un factor clave para poder implementar un PVA en obra seriacutea que este se iniciase con una revisioacuten exhaustiva del proyecto y la constatacioacuten en campo de la idoneidad de las medidas previstas siempre guiado por el objetivo de buscar los errores defectos y omisiones que el proyecto pudiera tener En este sentido es necesario contemplar protocolos para la definicioacuten de nuevas medidas correctoras ya que asiacute se consigue mante-ner la idea de que el PVA no es un documento ce-rrado durante la ejecucioacuten de las obras de la misma manera que el propio proyecto puede sufrir profun-das modificaciones de aspectos tan relevantes como el trazado enlaces situacioacuten de estructuras etc De este modo en el caso de detectarse alguna caren-cia en los estadiacuteos iniciales la direccioacuten facultativa dispondriacutea de un margen superior de tiempo para reconducir situaciones adversas y adoptar las medi-das que se consideraran oportunas por la asistencia teacutecnica (Gil Esteban 2006)

Por todo ello el objetivo fundamental que tiene este capiacutetulo es proponer un escenario compatible con la legislacioacuten vigente que permita potenciar el papel del seguimiento y la vigilancia ambiental de los proyectos y actividades sometidas a EIA par-ticularmente los de infraestructuras de transporte asiacute como resaltar su complementariedad con los procesos de aseguramiento de la calidad que rea-lizan algunos actores que participan en distintas

fases de su ciclo de vida con el fin uacuteltimo de fo-mentar la retroalimentacioacuten del sistema por medio de un protocolo de funcionamiento basado en la creacioacuten de comisiones multidisciplinares que per-mita exponer y consolidar el conocimiento emana-do de la experiencia acumulada por los antildeos de implantacioacuten de la EIA en Espantildea dado que en la actualidad en todos los aacutembitos afectados se considera deficiente Para lograrlo es necesario di-ferenciar el papel y el significado del seguimiento y la vigilancia contemplados en el actual Reglamento de EIA (RD 1131988) y desarrollar los contenidos y actores intervinientes en cada fase de acuerdo con la distincioacuten baacutesica que se presenta en el Cuadro 5

3 Los PVA en el marco legal Vinculacioacuten con la DIA y el proyecto

Los PVA habitualmente se incorporan al proyecto de construccioacuten en el caso de las infraestructuras de transporte como un capiacutetulo del anejo de Integracioacuten Ambiental (a veces denominado lsquoOrdenacioacuten ecoloacutegi-ca esteacutetica y paisajiacutesticarsquo o similar) en el que se parti-cularizan las medidas disentildeadas atendiendo al condi-cionado de la DIA

Esta disposicioacuten en el Proyecto hace que en oca-siones tanto el anaacutelisis del cumplimiento de la DIA como el disentildeo del PVA se perciban como un tema exclusivamente ambiental reducieacutendose la participacioacuten en su disentildeo y en el de las medidas correctoras de otros teacutecnicos involucrados en la redaccioacuten de los proyectos como podriacutean ser quie-nes elaboran los anejos de geologiacutea geotecnia hidrologiacutea y drenaje etc Por otro lado la misma circunstancia hace que aspectos relevantes de es-tos apartados se diluyan entre los varios centena-res de paacuteginas que pueden ocupar los anejos de integracioacuten ambiental dado el amplio espectro de variables que se tratan en ellos

La aplicacioacuten de estos programas se realiza de ma-nera maacutes o menos exhaustiva durante la construc-cioacuten de la obra con notables diferencias de unos casos a otros pero en general no trasciende al pla-zo de garantiacutea de la misma (normalmente los dos antildeos posteriores a la finalizacioacuten de los trabajos) Por otro lado la dispersioacuten de la informacioacuten en-tre administraciones entre el oacutergano sustantivo y el ambiental asiacute como los dispares procedimientos de adjudicacioacuten de estos trabajos no permiten el acce-so a los resultados consolidaacutendose una situacioacuten de desconocimiento bastante generalizada sobre la consistencia de los PVA y su aplicacioacuten real

Figura 1 Ejemplos contrapuestos sobre la proteccioacuten de pies arboacutereos en distintas obras En la imagen superior se ilustra la ausencia de protecciones (Foto Xavier Artigas) y en la inferior cada ejemplar arboacutereo se encuentra protegido por un cerramiento riacutegido a su vez recubierto por telas que incrementan su visibilidad

En este sentido llama poderosamente la atencioacuten los resultados de una investigacioacuten de Arce et al (2006) basada en un cuestionario remitido a em-presas constructoras y consultoras de Ingenieriacutea en el que un 64 de las primeras manifiesta que siacute se realiza alguacuten tipo de control de las medidas preven-tivas y correctoras mientras que entre las empresas consultoras tan solo responde afirmativamente un

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36 Esto quiere decir que un aspecto fundamental del proyecto desde el punto de vista de su apro-bacioacuten ambiental se ha ignorado sistemaacuteticamente en fase de obras (seguacuten reconoce un tercio de las empresas constructoras y sospechan dos tercios de las empresas redactoras de proyectos)

Es decir en general durante mucho tiempo se ha venido consintiendo una situacioacuten irregular respec-to a la disciplina ambiental es decir la vigilancia y el seguimiento su cumplimiento y la imposicioacuten de sanciones cuando proceda No obstante con el tiem-po tambieacuten se van conociendo iniciativas realmente interesantes para la aplicacioacuten de estos PVA que maacutes adelante se comentaraacuten

Cuadro 4 Principales problemas para la implementacioacuten de los PVA

- Los recursos que se requieren para ejecutar con solvencia el PVA en general no se pre-supuestan con el detalle que corresponderiacutea a cualquier medida que se define en la fase de redaccioacuten de proyecto En ocasiones el contra-tista principal de la obra acaba asumiendo una parte de estos costes

- No existe un seguimiento a maacutes largo plazo de las medidas aplicadas y los aspectos ambien-tales que podriacutea ser fundamental para recabar informacioacuten valiosa sobre la verdadera efecti-vidad de las medidas de revegetacioacuten protec-cioacuten de la fauna etc

- En la praacutectica se diluyen las responsabilidades entre los agentes implicados (promotor oacutergano sustantivo oacutergano ambiental asistencia teacutecni-ca direccioacuten facultativa contratista operador o concesionariohellip) en relacioacuten con la aplicacioacuten de los programas de vigilancia y seguimiento

- El dispar tratamiento de los PVA en fase de pro-yecto (unas veces incluidos en el presupuesto de ejecucioacuten material otras en el de inversioacuten en ocasiones ausentes etc) no contribuye a clarificar las responsabilidades menos auacuten cuando el esquema de participacioacuten se vuelve algo maacutes complejo de lo habitual

Figura 2 En la imagen superior tiacutepico cartel que anuncia unas obras y pide disculpas a los usuarios por las molestias ocasio-nadas durante las mismas que permanece por tiempo indefinido durante la fase de explotacioacuten En la imagen inferior unas panta-llas acuacutesticas tiacutepica medida correctora de impacto ambiental cuya eficacia no podraacute ser verificada hasta la puesta en servicio de la infraestructura (Foto Carlos Iglesias)

Las principales etapas del ciclo de vida de una infra-estructura lineal se resumen en la Figura 3

Estudio baacutesicoEstudio de trazado

Elaboracioacuten delproyecto de

construccioacuten

Ejecucioacuten(construccioacuten)+ garantiacutea

Elaboracioacuten delproyecto baacutesico

EIA

Incorporacioacutenrequisitos DIA

ElaboracioacutenPVA

Operacioacutenconservacioacuten y mantenimiento

Demolicioacuten o deconstruccioacuten

Vigilanciaambiental

Seguimiento alargo plazo

PreliminarPVA

Figura 3 Esquema habitual de la EIA en Espantildea en relacioacuten con los proyectos de las infraestructuras de transporte

Como es sabido la DIA cuando es positiva cons-tituye la autorizacioacuten de la obra a los efectos am-bientales e incluye buena parte de los requisitos que en esta materia seraacuten aplicables Entre otros las condiciones del trazado las principales medidas preventivas y compensatorias los criterios para el disentildeo de las medidas correctoras y en particular los objetivos y exigencias de la vigilancia ambiental

Dichos aspectos sin embargo no siempre son faacuteci-les de trasladar a los PVA debido entre otras cosas a que la fase en que se evacua la DIA es auacuten muy temprana en el disentildeo del proyecto En ese momen-to es difiacutecil tener una idea clara de cuaacuteles van a ser las variables ambientales o las medidas correctoras que requeriraacuten un mayor esfuerzo de monitorizacioacuten en las fases de construccioacuten y operacioacuten

Para orientar la consecucioacuten de los objetivos ex-puestos en este capiacutetulo hacia todas las fases del ci-clo de vida de una infraestructura de transporte y en general de cualquier otro tipo de proyecto sometido a EIA se parte inicialmente de la idea de incluir un anejo especiacutefico en el proyecto por ejemplo deno-minado lsquoCumplimiento de la DIA y vigilancia y segui-miento ambientalrsquo puesto que el cumplimiento del condicionado de la DIA empieza en fase de proyecto afecta a todos sus anejos y se prolonga en obra y durante la fase de explotacioacuten

Este anejo deberiacutea ser coordinado por el autor del proyecto y exclusivamente dedicado a justificar coacutemo

se cumple la DIA en los distintos documentos de un proyecto dado que la definicioacuten de muchas de estas medidas es ajena al anejo de integracioacuten ambiental y contribuiriacutea a implicar al conjunto de los teacutecnicos que participan en la redaccioacuten de un proyecto bajo la responsabilidad de quienes poseen la capacidad de firmarlo Se favoreceriacutea asiacute la coordinacioacuten de un escenario de trabajo efectivamente pluridisciplinar en el que las posibles incoherencias del proyecto se pondriacutean de manifiesto y cada redactor de un ane-jo percibiriacutea la influencia de su trabajo sobre otros apartados Finalmente cuando se iniciara la fase de obras se facilitariacutea el conocimiento de los detalles concretos que afectan a los aspectos de la vigilancia y del seguimiento ambiental respecto a la situacioacuten actual que obliga a indagar entre las decenas de anejos de un proyecto y los centenares de paacuteginas de algunos de ellos

Otro de los objetivos fundamentales de este capiacutetulo del libro reside en la necesidad de homogeneizar y poner de relieve el valor de las tareas de seguimien-to y vigilancia ambiental en obra y durante la fase de explotacioacuten de las infraestructuras de transpor-te poniendo de manifiesto el significado de ambos conceptos y la existencia en ocasiones de activida-des duplicadas que se desarrollan de manera para-lela por diferentes actores sin que exista un flujo de informacioacuten coherente que sirva al sistema para aclarar el estado de conocimiento en las materias en cuestioacuten ni mucho menos conocer los resultados correspondientes a experiencias anteriores

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Cuadro 5 Distincioacuten baacutesica entre vigilancia ambiental y seguimiento ambiental y objetivos fundamentales

1 Vigilancia ambiental fundamentalmente de caraacutecter teacutecnico antes y durante la ejecucioacuten de las obras estariacutea centrada en

bull Detectar y corregir posibles deficiencias del proyecto de construccioacuten

bull Verificar la adecuacioacuten de las medidas proyectadas a la realidad final de la obra

bull Supervisar la correcta ejecucioacuten de las medidas ambientales (pantallas acuacutesticas revegetacioacuten pasos de fauna etc)

bull Controlar los aspectos ambientales relevantes de la obra (pe seguimiento de la calidad de las aguas superficiales afecciones a los haacutebitats silvestres emisiones atmosfeacutericas etc) Y deteccioacuten de impactos no previstos anteriormente

bull Determinar la posible supresioacuten modificacioacuten o introduccioacuten de nuevas medidas preventivas y correctoras conforme al protocolo que contemple el propio pva en ausencia de normas especiacuteficas al respecto

2 Seguimiento ambiental a medio y largo plazo (orientativamente de 3 a 10 antildeos) desde el momento de recepcioacuten de la obra y posteriormente tambieacuten adquiririacutea un sentido cientiacutefico y se centrariacutea en

bull Verificar la evolucioacuten de las medidas implantadas (pe Revegetacioacuten uso de pasos de fauna etc) Para evaluar su eficacia a medio y largo plazo

bull Recabar informacioacuten sobre los impactos de la infraestructura en el medio ambiente (pe Efecto barrera) y la posible aparicioacuten de otros no previstos

bull Informar y servir de input para futuros proyectos en el marco de una continua mejora del procedimiento de eia y de la prevencioacuten y correccioacuten de impactos ambientales en particular

PromotorRedaccioacuten del EsIA (y PVA)Explotacioacuten de la infraestructura

Oacutergano ambiental DIA

Oacutergano sustantivo Vigilancia y seguimiento

Figura 4 Esquema habitual del papel de los oacuterganos ambiental y sustantivo en el modelo de EIA en Espantildea (diferente en algunas comuni-dades autoacutenomas) En el caso de las infraestructuras de transporte suele coincidir que el promotor es a la vez oacutergano sustantivo

II CONTEXTO GENERAL DE LOS PVA EXPECTATIVAS Y DEFICIENCIAS

1 Los PVA en el contexto del ciclo de vida de la infraestructura Agentes implicados

El RDL 12008 establece que corresponde al oacutergano sustantivo (en el caso de infraestructuras de trans-porte puede ser el Estado las autonomiacuteas o incluso algunas diputaciones) el seguimiento y vigilancia del cumplimiento de la DIA o a los oacuterganos que en su caso designen las comunidades autoacutenomas respec-to de los proyectos que sean de su competencia Al situarse en un estatus cuanto menos confuso seguacuten las casuiacutesticas posibilitadas por el tipo de proyecto y las administraciones competentes en la praacutectica la vigilancia queda desligada en cierto modo de la evaluacioacuten puesto que el PVA se redacta en fase de proyecto (dada la escasa definicioacuten posible en el EsIA) lo cual no significa que sea una medida maacutes a ejecutar por el contratista de las obras puesto que este no deberiacutea vigilarse a siacute mismo De estas

consideraciones deriva tambieacuten la conveniencia de segregar del anejo de integracioacuten ambiental el PVA y el programa de seguimiento que maacutes adelante se trata junto con la justificacioacuten de coacutemo el proyecto cumple las condiciones de la DIA ya que las me-didas preventivas y correctoras definidas en dicho anejo siacute corresponde ejecutarlas al contratista En la praacutectica esta circunstancia se resuelve la mayoriacutea de las veces mediante una asistencia teacutecnica a la direccioacuten de obra frecuentemente asumida por la misma asistencia que verifica la ejecucioacuten del pro-yecto lo cual no impide que la empresa constructora realice simultaacuteneamente en el marco de su propio programa de aseguramiento de la calidad (PAC) al-gunas actividades que en ocasiones se solapan con la propia vigilancia ambiental

La legislacioacuten baacutesica tambieacuten establece claramen-te que el oacutergano ambiental podraacute recabar infor-macioacuten del oacutergano sustantivo asiacute como efectuar las comprobaciones necesarias para verificar el cumplimiento de la DIA tanto en fase de obras como de explotacioacuten A raiacutez de estos supuestos algunas comunidades autoacutenomas han otorgado mayores competencias al oacutergano ambiental asig-naacutendoles las funciones de vigilancia ambiental como en el ya citado caso de la Comunidad de Madrid (Ley 22002 BOCM nordm 154 de 1 de julio de 2002)

Otro aspecto que indudablemente podriacutea contri-buir a la mejora del funcionamiento de los actua-les modelos seriacutea la clasificacioacuten en funcioacuten de sus capacidades de las entidades y profesionales implicados en tareas de vigilancia y control am-biental de obras y de seguimiento de la eficacia de las medidas correctoras

En este sentido destaca el caso de la Junta de Comunidades de Castilla-La Mancha donde existe un Registro de Entidades y Profesionales Autoriza-dos para el seguimiento y control de actividades sometidas a EIA regulado por la Orden de 26-01-2005 de la Consejeriacutea de Medio Ambiente (DOCM nordm 24 de 3 de febrero de 2005) De esta manera se atribuye a estas entidades la responsabilidad sobre el contenido de los informes realizados que deben presentarse tras cada actuacioacuten en la

delegacioacuten provincial correspondiente de la Con-sejeriacutea de Medio Ambiente Las entidades y profe-sionales interesados se pueden acreditar hasta en ocho aacutembitos funcionales (Cuadro 6) en funcioacuten de sus recursos teacutecnicos

Se trata de una estructura organizativa bastante acertada para establecer las bases de una vigilan-cia y un seguimiento ambiental que deben evo-lucionar hacia la integracioacuten efectiva de especia-listas en cada variable a controlar Sin embargo resulta ser un planteamiento inviable mientras los PVA no se presupuesten de manera detallada Es loacutegico pensar que cualquier medida o actividad que represente un coste imprevisto no seraacute asu-mida por ninguacuten agente por lo que los recursos humanos y materiales necesarios para cualquier tarea de seguimiento ambiental deberiacutea valorarse a la vez que se define el PVA e incluirse en el presupuesto de inversioacuten (antes denominado para conocimiento de la administracioacuten) En ninguacuten caso debe incluirse en el presupuesto de ejecu-cioacuten material (PEM) puesto que no corresponde al contratista de la obra su ejecucioacuten y posible-mente su duracioacuten exceda a la de la obra y a la del periacuteodo de garantiacutea de la misma La existencia de un cuadro de precios para cada actividad de vigilancia y seguimiento asiacute como su descomposi-cioacuten permitiriacutea conocer al promotor el presupues-to que debe disponer para realizar la vigilancia y el seguimiento ambiental

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Cuadro 6 Grupo de actividades para el que se solici-ta acreditacioacuten en el Registro de Entidades y Profesionales autorizados para el segui-miento y control de actividades sometidas a EIA en Castilla-La Mancha

1- Flora y vegetacioacuten

2- Fauna

3- Paisaje

4- Agua

5- Gea y suelo

6- Atmoacutesfera

7- Patrimonio histoacuterico artiacutestico y arqueoloacutegico y paleontoloacutegico

8- Ser humano relaciones asociales y condiciones de sosiego puacuteblico

Por supuesto teniendo en cuenta el modelo que maacutes adelante se presenta la valoracioacuten econoacutemica del PVA no deberiacutea incluirse en el presupuesto de ejecucioacuten material del proyecto puesto que en nin-guacuten caso deberiacutea realizarlo el contratista construc-tor Esta obviedad debido al escaso desarrollo de algunos aspectos confusos de la legislacioacuten y so-bre todo las particularidades propias de cada tipo de proyecto lleva a poner de relieve la importancia de la disposicioacuten adicional segunda del RDL 12008 Dicha disposicioacuten adicional habilita al Gobierno en el aacutembito de sus competencias para el desarrollo reglamentario de la Ley en particular para aprobar normas baacutesicas mediante real decreto sobre aque-llos aspectos de caraacutecter teacutecnico o de naturaleza coyuntural y cambiante necesarios para asegurar el miacutenimo comuacuten denominador establecido en la Ley Sin lugar a dudas la vigilancia ambiental es un aspecto muy concreto de la evaluacioacuten ambien-tal que necesita un desarrollo particularizado para cada tipo de proyecto o actividad desde hace mu-cho tiempo

2 Las comisiones mixtas como mecanismo de refuerzo y control

En el caso de Cataluntildea en el texto de las propias DIA se establece como una condicioacuten maacutes al proyec-to la necesidad de formalizar una Comisioacuten Mixta de Concertacioacuten y Control (CMCC) entre el oacutergano ambiental y el oacutergano sustantivo con la finalidad de controlar el contenido periodicidad aplicacioacuten eacutepoca de realizacioacuten de las medidas correctoras y de proteccioacuten que sentildeala la DIA

PROMOTOR OacuteRGANO SUSTANTIVO

OacuteRGANO AMBIENTAL

DIRECCIOacuteN DE OBRA

CONTRATISTA

DIRECCIOacuteN AMBIENTAL DE OBRA

Figura 5 La composicioacuten de la Comisioacuten Mixta de Concertacioacuten y Control (CMCC) estaacute formada como miacutenimo por el promotor el oacutergano sustantivo y el oacutergano ambiental Ademaacutes suelen incorpo-rarse las figuras del director de obra jefe de obra de la empresa adjudicataria y la direccioacuten ambiental de obra (DAO)

Esta CMCC permite al oacutergano ambiental realizar un seguimiento a pie de obra del desarrollo de la mis-ma de forma que contribuye a la correcta ejecucioacuten de las medidas contempladas asiacute como en su defi-nicioacuten cuando resulta preciso hacerlo durante la fase de obras

De la misma forma cualquier modificacioacuten sustan-cial del proyecto que haya de someterse a valoracioacuten se dirime inicialmente en el seno de la CMCC El promotor aporta los datos necesarios y justificati-vos del cambio solicitado junto con una valoracioacuten ambiental y definicioacuten del grado de adecuacioacuten con la DIA realizada por la direccioacuten ambiental de obra (DAO) La CMCC se pronuncia sobre la modificacioacuten y propone al oacutergano ambiental la tramitacioacuten a seguir e informa sobre el cambio solicitado

CMCC PROMOTOR (Consulta)

DECISIOacuteN

DAO (Informe)

Figura 6 Esquema de funcionamiento de la CMCC ante la consulta del promotor sobre una modificacioacuten sustancial del proyecto

Las funciones asiacute estaacuten repartidas claramente de acuerdo con la legislacioacuten el oacutergano ambiental realiza la evaluacioacuten ambiental y establece las medidas el promotor del proyecto es el respon-sable de incorporar las medidas que establece la DIA y el oacutergano sustantivo es el responsable tan-to de hacerlas cumplir como de su seguimiento y

vigilancia La CMCC uacutenicamente supervisa su cum-plimiento y facilita la relacioacuten entre los distintos actores

En todo caso en este esquema la DAO es respon-sable de la aplicacioacuten del PVA desde las fases ini-ciales y previas a la ejecucioacuten del proyecto hasta la finalizacioacuten siendo sus funciones principales las habituales de la vigilancia ambiental El uacutenico cam-bio reside en la existencia de un marco formal de funcionamiento que compensa la debilidad habi-tual de la DAO en escenarios en los que quedariacutea relegada a un segundo plano entre los actores im-plicados

Cuadro 7 Funciones habituales de la DAO

bull Verificar que se cumplen los condicionantes impuestos por la DIA y se ejecutan las medi-das proyectadas

bull Supervisar la ejecucioacuten de las medidas preventi-vas correctoras y compensatorias previstas asiacute como el cumplimiento de aquellas medidas nue-vas aprobadas por la CMCC

bull Planificar y verificar los sistemas de control propuestos en el PVA y realizar los controles

bull Identificar y valorar impactos ambientales residuales o no previstos en el EIA y propo-ner nuevas medidas para minimizar o corre-gir los impactos de forma adecuada

bull Valorar la eficacia de las medidas ejecuta-das respecto a los objetivos ambientales y el grado de correccioacuten en la valoracioacuten del impacto

bull Asesorar al contratista durante la ejecucioacuten de la obra para la correcta aplicacioacuten de las medidas establecidas asiacute como sobre la tra-mitacioacuten de los permisos necesarios

bull Redactar los informes de seguimiento para el oacutergano sustantivo y oacutergano ambiental

bull Redactar y asumir la direccioacuten obra del pro-yecto de medidas correctoras

bull Mantener la coordinacioacuten con la direccioacuten de obra

Indicar por uacuteltimo que en el marco de una CMCC con encuentros regulares durante la ejecucioacuten de las obras es maacutes faacutecil motivar al contratista para la realizacioacuten en tiempo y forma de los diferen-tes traacutemites de caraacutecter ambiental que puedan precisarse

Cuadro 8 Traacutemites entre otros a los que queda obli-gado el contratista para la correcta ejecu-cioacuten del PVA

bull Proporcionar la informacioacuten sobre la forma de ejecucioacuten y materiales utilizados durante la ejecucioacuten de unidades de obra con posibles implicaciones ambientales

bull Facilitar las muestras o el acceso a ellos que se determinen en el PVA

bull Documentar la gestioacuten de residuos

bull Aportar los certificados de calidad de los diferentes materiales utilizados en sus actuaciones (pe la restauracioacuten vegetal)

bull Obtener cuantos permisos de caraacutecter ambiental vertederos vertidos de aguas preacutestamos etc precise

3 Situacioacuten actual de la vigilancia ambiental en relacioacuten con el control de calidad

En la actualidad la vigilancia ambiental queda en-marcada durante la ejecucioacuten de las obras en el con-trol de calidad de las mismas existiendo el riesgo de que se convierta en un formalismo a modo de repa-so de una lista de comprobaciones y la supervisioacuten de autorizaciones dejando de lado la comprobacioacuten de la efectividad de las medidas

Un aspecto importante que hay que considerar es la posibilidad de que la DAO esteacute desligada de la direc-cioacuten de obra lo cual no impide que sus funciones es-teacuten claras y coordinadas con ella Este esquema que a priori puede generar cierta inquietud tendriacutea mejor adaptacioacuten a los recursos realmente disponibles para dichas labores permitiendo una mayor especializa-cioacuten de las funciones ambientales y un mayor grado de control para la correcta ejecucioacuten del PVA

Un ejemplo eficaz de esta adaptacioacuten se encuen-tra reproducido en el modo en que el Administra-dor de Infraestructuras Ferroviarias (ADIF) desa-rrolla la gestioacuten ambiental de las obras de alta velocidad en Espantildea Para ello mediante un pro-cedimiento interno de gestioacuten y coordinacioacuten de actividades ambientales atribuye a la Direccioacuten de Medio Ambiente la responsabilidad del control y vigilancia ambiental de las obras Esta Direc-cioacuten es dependiente de la Direccioacuten de Calidad y Medio Ambiente dentro de la DG de Organiza-cioacuten Seguridad y Recursos Humanos de ADIF Es

Direccioacuten de obra

Comisioacuten Mixta de Concertacioacuten y

Control (CMCC)

Promotor

Contratista

Direccioacuten ambientalde obra

Oacutergano ambiental

Oacutergano sustantivo

DecisioacutenPromotor (Consulta)

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decir la vigilancia y el seguimiento ambiental y por tanto la responsabilidad de certificar el cum-plimiento de la DIA en obra recae en un aacuterea di-ferente de la que dirige la ejecucioacuten de las obras con el objetivo de garantizar la independencia en el proceso (Matas 2008)

Direccioacuten de Calidad y Medio Ambiente

DIRECCIOacuteN AMBIENTAL DE OBRA

DG Grandes Proyectos de Alta Velocidad

DG Desarrollo de la Infraestructura

DG Explotacioacuten de la Infraestructura

PROYECTOS Y EsIADIRECCIOacuteN

FACULTATIVAEXPLOTACIOacuteN

Presidencia

D Comunicacioacuten y Relaciones Externas

Secretariacutea General y del Consejo

DG Seguridad Organizacioacuten y RR HH

DG Planificacioacuten Estrateacutegica

DG Econoacutemico Financiera y de Control

Direcciones de Liacutenea de Alta Velocidad

Figura 7 Esquema simplificado de la asignacioacuten de las responsabilidades de direccioacuten facultativa y DAO en diferentes direcciones generales de ADIF

En este caso la DAO suele recaer sobre una asistencia teacutecnica que supervisa la ejecucioacuten de tres o cuatro tra-mos consecutivos en coordinacioacuten con la direccioacuten fa-cultativa a pie de obra A su vez las diferentes DAO de una liacutenea completa estaacuten coordinadas por teacutecnicos es-pecialistas de la Direccioacuten de Medio Ambiente de ADIF

El anterior esquema de funcionamiento interno cons-tituye un enfoque ambicioso y novedoso en cuanto al compromiso por parte del promotor y oacutergano sus-tantivo en este caso se refiere puesto que impide que una direccioacuten general se certifique a siacute misma el cumplimiento de la DIA Por otro lado las mejoras introducidas a partir de los resultados que con el tiempo se van obteniendo empiezan a ser recono-cidas en el sector y a emplearse como referencias incluso para otros proyectos

Sin embargo volviendo sobre los austeros escena-rios maacutes habituales de la vigilancia ambiental en Espantildea la ausencia de un programa de seguimiento durante la fase de explotacioacuten de las infraestructuras no permite obtener datos concluyentes del grado de eficiencia de las medidas preventivas correctoras y compensatorias aplicadas durante la construccioacuten Esta deficiencia histoacuterica provoca una carencia de

informacioacuten para la elaboracioacuten de los EsIA con-solidando la redaccioacuten de medidas estaacutendar cuya eficiencia es teoacuterica pero no universal

El desarrollo de programas de seguimiento (PS) permitiriacutea evaluar la eficacia de las medidas pro-yectadas asiacute como la posibilidad de modificarlas en caso de necesidad o disponer la ejecucioacuten de medidas adicionales en caso de preverse o de-tectarse nuevos impactos durante los trabajos de mantenimiento de la infraestructura Otro aspecto que se percibe de manera generalizada entre los distintos agentes implicados es que determinados trabajos de mantenimiento pueden impedir el co-rrecto funcionamiento de alguna medida correctora y viceversa Sin embargo la ausencia de evidencias documentadas resulta alarmante despueacutes de tantos antildeos de desarrollo de nuestra red de infraestructu-ras de transporte

Figura 8 Dispositivos de escape para fauna mal ejecutados como consecuencia de una vigilancia ambiental deficiente o a la que no se le reconoce autoridad El primer dispositivo estariacutea constituido por un muro inexistente y una rampa de tierra inacabada (Foto TEG-UAM) El segundo por un portillo abatible que al estar su base enterrada no se puede abrir (Foto Carlos Iglesias)

Debe tenerse en cuenta que la fase de explotacioacuten puede ser administrativamente tan compleja o maacutes que la fase de construccioacuten y que la aparicioacuten de nuevos actores mediante diferentes foacutermulas de con-cesioacuten puede generar una casuiacutestica sin fin En todo

caso conviene que los efectos de caraacutecter ambiental se monitoricen por medio de un programa que cubra esta fase desde el momento en que se recibioacute la obra cuya realidad diferiraacute por completo de la que se daba durante la construccioacuten

III PROGRAMA DE VIGILANCIA AMBIENTAL Y PROGRAMA DE SEGUIMIENTO

1 Esquema director propuesto

Como ya se ha recogido con anterioridad la legisla-cioacuten vigente no diferencia entre las funciones de la vi-gilancia y el seguimiento refirieacutendose indistintamente a ellas como si se tratara de la misma actividad Sin embargo son referidas con la conjuncioacuten copulativa lsquorsquoyrsquorsquo que coordina aditivamente elementos anaacutelogos Es decir consciente o inconscientemente en la legis-lacioacuten baacutesica vigente queda establecida una relacioacuten de semejanza entre dos conceptos anaacutelogos que tie-nen entre siacute alguna coincidencia significativa

Cuadro 9 Definiciones del Diccionario de la Lengua Espantildeola (RAE 2001)

Vigilancia (Del lat vigilant a) cuidado y atencioacuten exacta en las cosas que estaacuten a cargo de cada uno

Seguimiento accioacuten y efecto de seguir

Seguir (Del lat sequ re de sequi con la t de ire) proseguir o continuar en lo empezado

De acuerdo con las definiciones del diccionario de la lengua espantildeola (RAE 2001) la vigilancia con-siste en el cuidado y atencioacuten exacta en las cosas que estaacuten a cargo de cada uno mientras que el seguimiento es la accioacuten y efecto de seguir encon-traacutendose entre las diversas acepciones de seguir las que lo definen como la accioacuten de proseguir o continuar lo empezado asiacute como observar el curso de algo (Cuadro 9) Por tanto teniendo en cuenta estas matizaciones la duracioacuten limitada de la obra de construccioacuten de una infraestructura de transporte frente a su posterior vida uacutetil y la necesidad de vigi-lar y seguir distintos aspectos ambientales en ambas fases con la participacioacuten de diferentes agentes se propone un esquema director que permita diferen-ciar las actividades a realizar en cada una de ellas

Mientras que los objetivos de la vigilancia quedan claramente establecidos en el RD 11311988 la legis-lacioacuten baacutesica vigente no los incluye entre los con-ceptos que define en su anexo 1 Paralelamente el capiacutetulo III del RDL 12008 referido al control del cumplimiento de las DIA establece su marco baacutesico de desarrollo alternando referencias al seguimiento y vigilancia sin establecer diferencias pese a que no

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tienen el mismo significado vigilancia y seguimiento Ante esta situacioacuten y teniendo en cuenta los posi-bles agentes implicados en las distintas fases de proyecto obra y explotacioacuten de una infraestructura

de transporte se advierte la posibilidad de confec-cionar un esquema director de mayor detalle viable y realista que permita la propuesta e implementa-cioacuten de un PVA y un PS vigentes en distintas fases

Estudio Informativo EIA

Proyecto de construccioacuten Ejecucioacuten

APROBACIOacuteN

APROBACIOacuteN

Plan de autocontrol ambiental en obra

Autocontrol ambiental

Deteccioacuten no conformidades (NC)

Ejecucioacuten de medidas y resolucioacuten NC

PLAN de seguimiento Seguimiento

ambiental

Informes de seguimiento

Anaacutelisis y compilacioacuten

Informes de vigilancia

Vigilancia ambiental

Anaacutelisis y en su caso APROBACIOacuteN

PROYECTO (medidas

ambientales)

PROGRAMA de vigilancia

(PVA) y seguimiento

DIA

Retroalimentacioacuten para la mejora de futuros proyectos

Operacioacuten

Oacuterg

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Figura 9 Diagrama de flujo que recoge las distintas fases de la vigilancia ambiental por ejemplo aplicada a las plantaciones en una infra-estructura de transporte los principales documentos que en cada caso se generan asiacute como los agentes implicados en su implementacioacuten

La ejecucioacuten de un proyecto se puede esquematizar en cuatro etapas seguacuten su secuencia cronoloacutegica

bull Fase 1 ndash Fase inicial comienza con el replan-teo de la obra se inicia la implementacioacuten del PVA mediante la evaluacioacuten del contenido de la DIA se revisa el proyecto y se definen las acciones de control ambiental a determinar durante la ejecucioacuten de las obras Se configu-ra el PVA ajustado a la obra en cuestioacuten de acuerdo con lo establecido en la DIA

bull Fase 2 ndash Fase de obras construccioacuten de la infraestructura y liacutemite de vigencia del PVA como se concibe actualmente con el informe final de recepcioacuten de la obra

bull Fase 3 ndash Periodo de garantiacutea primera parte de la fase de explotacioacuten de la infraestructu-ra hasta que finaliza el periacuteodo habitual de garantiacutea A partir de este momento ya no rige el proyecto de construccioacuten y las tareas de seguimiento deben orientarse a evaluar la efi-cacia y evolucioacuten de las medidas correctoras que acompantildearaacuten a la infraestructura durante su vida uacutetil Por ello se propone como mo-mento de inicio del PS a modo de extensioacuten del PVA durante la fase de funcionamiento En este caso teniendo en cuenta un escenario realista de actores y presupuesto se debe-riacutea considerar la capacidad del operador para desempentildear las tareas que por otro lado ac-tualmente ya realiza en muchos casos

bull Fase 4 -Fase de explotacioacuten periacuteodo varia-ble de aplicacioacuten del PS en funcioacuten de las variables objeto del mismo Durante esta etapa se supone una incesante obtencioacuten de resultados fruto de los antildeos de segui-miento sobre el grado de eficacia de las medidas proyectadas Todo ello constituye informacioacuten baacutesica para futuros proyectos

en funcioacuten de los objetivos inicialmente fi-jados que deberiacutea centralizarse mediante sistemas de informacioacuten de faacutecil acceso en el oacutergano ambiental como uacutenico agente conocedor de los procedimientos de EIA desarrollados en relacioacuten con cualquier ti-pologiacutea de proyectos en el aacutembito de sus competencias

Fase 1 (replanteo)

Inicio del PVA

Fase 2 (obras)

PVA (hasta recepcioacuten de la obra)

Fase 3 (garantiacutea)

Inicio del PS

Fase 4 (explotacioacuten)

Continuacioacuten del PS

Recepcioacuten de la obra

Figura 10 Etapas de un proyecto en relacioacuten con el PVA y el PS

La duracioacuten del PS (fases 3 y 4) deberiacutea ser lo su-ficientemente extensa como para garantizar unas conclusiones vaacutelidas que permitan retroalimentar el sistema y la evolucioacuten en el disentildeo de las medidas proyectadas en funcioacuten de los resultados obtenidos y los objetivos inicialmente establecidos Depen-diendo de las variables a seguir se podriacutea recomen-dar una duracioacuten del PS de entre 3 y 10 antildeos

2 Responsabilidades y participacioacuten de los distintos agentes

Seguacuten el diagrama anterior el proyecto de cons-truccioacuten deberiacutea recoger no solo el PVA que re-giraacute durante la ejecucioacuten de las obras sino tam-bieacuten los criterios baacutesicos para el seguimiento ambiental a medio y largo plazo durante la fase de explotacioacuten lo que constituiriacutea el denomina-do PS

El PVA seriacutea de aplicacioacuten directa durante la construccioacuten (hasta la finalizacioacuten del plazo de

garantiacutea de la obra) y corresponderiacutea seguacuten el caso a la direccioacuten facultativa (actuando direc-tamente o a traveacutes de una asistencia teacutecnica) o por ejemplo al oacutergano ambiental en el caso de la Comunidad de Madrid En todo caso quedariacutea integrado en el marco de una CMCC si se ex-tendiese el modelo de funcionamiento de comi-siones mixtas aplicado en Cataluntildea El contra-tista principal podriacutea utilizar el programa para redactar su propio plan de autocontrol integrado en el sistema de aseguramiento de calidad de la obra Evidentemente el plan de autocontrol del contratista complementario del PVA deberiacutea gozar del visto bueno por parte de la direccioacuten facultativa Se supone que a lo largo de la ejecu-cioacuten de los trabajos ambos direccioacuten y contra-tista identificaraacuten no conformidades que seraacuten resueltas por el contratista (incluyendo tambieacuten aquellas vinculadas a las medidas medioambien-tales ejecutadas marras etc) Durante la fase de construccioacuten las pautas y los resultados de la vigilancia ambiental deberiacutean recogerse en in-formes de vigilancia redactados por la direccioacuten

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facultativa seguacuten la legislacioacuten baacutesica De alguna forma estos informes deberiacutean acabar en manos del oacutergano ambiental para lo que el modelo de las mencionadas comisiones mixtas se revela nuevamente como un esquema eficaz

Por uacuteltimo durante la explotacioacuten de la infraes-tructura el operador en el caso de carreteras o el administrador de la infraestructura en el caso de los ferrocarriles estariacutea en disposicioacuten de asumir el seguimiento ambiental a medio y largo plazo pues-to que en algunas ocasiones ya realiza actividades equivalentes como consecuencia de la implantacioacuten de sus sistemas de control de la calidad Ello per-mitiriacutea optimizar los recursos disponibles en labores de seguimiento que actualmente no se realizan in-volucrar a los administradores y operadores respon-sables de las infraestructuras en la elaboracioacuten de documentos e informes de intereacutes para la redaccioacuten de nuevos proyectos poner en valor los documentos que actualmente se generan en dichos procedimien-tos que en el actual esquema no son accesibles y sobre todo permitir el encuentro e intercambio de informacioacuten con actores que de otra manera no coincidiriacutean

Como se ha ilustrado en otros apartados de este capiacutetulo el seguimiento a largo plazo tendriacutea por objeto fundamentalmente generar informacioacuten uacutetil sobre la evolucioacuten del entorno afectado por la infraestructura asiacute como evaluar la eficacia de las medidas correctoras implantadas (incluyendo la revegetacioacuten) Si se quiere este programa de seguimiento tendriacutea un objeto menos teacutecnico y maacutes cientiacutefico (al menos en lo que se refiere a la utilidad de las variables objeto de la monitoriza-cioacuten) Al igual que se apuntaba con los informes de vigilancia los informes de seguimiento a me-dio y largo plazo deberiacutean acabar en el oacutergano ambiental Toda esta informacioacuten adecuadamente procesada tendraacute una indudable utilidad praacutectica para la redaccioacuten de proyectos en el futuro asiacute como para la definicioacuten de las medidas impuestas por las DIA

El modelo propuesto seriacutea compatible con las dis-tintas normas en materia de evaluacioacuten ambiental tanto la legislacioacuten baacutesica como con la de aque-llas comunidades autoacutenomas que de acuerdo con sus competencias han desarrollado esta quedado facultado el Ministerio de Medio Ambiente y Medio Rural y Marino para dictar cuantas disposiciones sean necesarias para el desarrollo de lo establecido

en la legislacioacuten vigente en particular en el actual Reglamento

Por uacuteltimo en el disentildeo de este esquema sobre la base de las experiencias conocidas particularmente el modelo de la CMCC y con el objeto de lograr un flujo de informacioacuten lo maacutes eficaz posible en el sistema seriacutea conveniente incorporar la figura de los redactores de los proyectos y de los EsIA a las citadas comisiones De este modo se situariacutean todos los actores implicados en las distintas fases del pro-yecto tal como se representa en la Figura 11

Propuesta de Comisioacuten Mixta de Concertacioacuten y

Control

(CMCC)

+ +

Direccioacuten de obra

Oacutergano sustantivo

Oacutergano ambiental

Direccioacuten ambiental de obra

Promotor

Contratista

Operadoradministrador

Redactores delProyecto y esia

Figura 11 La incorporacioacuten de los autores del proyecto y del EsIA y posteriormente de las entidades operadoras o administradoras de infraestructuras a las CMCC agilizariacutea la retroalimentacioacuten del sistema independientemente de que la responsabilidad en materia de vigilancia y seguimiento fuera competencia del oacutergano ambi-ental o del oacutergano sustantivo y es compatible con la realidad del Estado y de las distintas comunidades autoacutenomas

3 El seguimiento ambiental en el contexto del aseguramiento de la calidad

De todos es sabido que la implantacioacuten de sistemas y planes que garanticen y controlen la calidad es praacutectica habitual en el aacutembito de la construccioacuten y explotacioacuten de las infraestructuras de transporte sin embargo con frecuencia se omite esta circunstancia por los actores que habitualmente intervienen en los procedimientos de EIA ignoraacutendose las posibilida-des que en materia de seguimiento ambiental ofrece al sistema

En la documentacioacuten de calidad se incluyen o debe-riacutean incluirse las especificaciones de seguimiento y vigilancia ambiental como uno maacutes de los requisitos a cumplir (requisito legal de obligado cumplimiento cuando es consecuencia de la existencia de una DIA

o voluntario si es derivado de la normativa interna de la compantildeiacutea)

Por tanto como parte de la documentacioacuten de calidad en los informes de aseguramiento y con-trol de calidad se deberiacutean relacionar todas las medidas ambientales y sus no conformidades (si las hubiera) asiacute como su resolucioacuten En resumen como se ha tratado en otros apartados de este libro las condiciones ambientales deben ser teni-das en cuenta durante la elaboracioacuten del proyecto en la ejecucioacuten de las obras y durante la explota-cioacuten de la infraestructura

Los requisitos ambientales durante la fase de ela-boracioacuten del proyecto deben ser considerados ele-mentos de entrada al disentildeo (en sus diferentes fases desde el proyecto baacutesico hasta el disentildeo detallado en los proyectos de construccioacuten) y por tanto identificados desde el principio Los con-troles de revisioacuten del disentildeo para garantizar la calidad del mismo deberaacuten asegurar que los re-quisitos ambientales han sido tenidos en cuenta y durante las fases de ejecucioacuten y explotacioacuten se deberaacute obtener informacioacuten que verifique la efica-cia de dichas medidas si no han podido ser vali-dadas anteriormente En cualquier caso se reco-mienda la validacioacuten de dichas medidas a lo largo de la vida de la infraestructura para determinar la idoneidad de las mismas y que estos conocimien-tos puedan ser tenidos en cuenta en la redaccioacuten de futuros proyectos

Durante la ejecucioacuten de la obra con el fin de opti-mizar recursos y hacer maacutes eficiente los procesos asociados a la ejecucioacuten la empresa constructora deberaacute integrar los requisitos ambientales como un elemento maacutes en la gestioacuten de la obra Asiacute si dispo-ne de un plan de aseguramiento de la calidad (PAC) para garantizar que la obra se ejecuta conforme al proyecto se deberaacuten incluir como parte del PAC los procedimientos especiacuteficos de medio ambiente y con ellos los de control seguimiento y vigilancia de forma integrada o no con los de calidad Con esto quedariacutean desarrollados particularizados e in-tegrados en el PAC los requisitos de seguimiento y vigilancia para la fase de construccioacuten

Es praacutectica habitual identificar las unidades de obra con aspectos ambientales asociados para que se ejecuten conforme a lo establecido en los pro-cedimientos de control operacional y se controlen normalmente siguiendo un programa de puntos de

inspeccioacuten (PPI) Los controles a ejecutar durante la vigilancia y seguimiento ambiental en construccioacuten deberaacuten generar sus propios PPI

Como complemento a los autocontroles del contra-tista responsable de la ejecucioacuten de la obra hasta fi-nalizado el periacuteodo de garantiacutea el oacutergano sustantivo (seguacuten la legislacioacuten baacutesica) a traveacutes de la direccioacuten facultativa asistencia teacutecnica o cualquier otra figura independiente respecto de quien ha ejecutado las medidas ambientales establecidas en la DIA haraacute el seguimiento y la vigilancia de dichas medidas con el fin de garantizar su eficacia Como ya se ha comen-tado anteriormente esta responsabilidad en algunas autonomiacuteas recae por ley en el oacutergano ambiental Igualmente el oacutergano ambiental se puede apoyar en una asistencia teacutecnica independiente de quien ejecute las medidas ambientales

Una vez que la infraestructura entra en funciona-miento el responsable de la operacioacuten seriacutea quien como parte de la gestioacuten de la infraestructura de-sarrollara un PS en explotacioacuten que dariacutea respuesta por un lado al cumplimiento de las obligaciones ambientales recogidas en la DIA para esta fase y por otro lado definiriacutea aquellos paraacutemetros ambientales que deberaacute monitorizar Dicha monitorizacioacuten serviraacute para verificar a medio y largo plazo el comporta-miento ambiental de las medidas de restauracioacuten acometidas durante la construccioacuten asiacute como su respuesta ante las labores de mantenimiento que se esteacuten llevando a cabo Estos trabajos de segui-miento ambiental de la empresa que opera y man-tiene la infraestructura deberaacuten estar documentados y registrados como un elemento maacutes de su sistema de gestioacuten optimizando recursos e integrando estos con otros controles de calidad de la infraestructura que pueden estar soportados en el sistema de ca-lidad de la empresa responsable de estos trabajos

Finalmente la participacioacuten de esta entidad en la CMCC creada antes de que se iniciara la obra de la infraestructura en cuestioacuten (Figura 11) permitiriacutea completar el flujo de informacioacuten y la vocacioacuten de servicio puacuteblico que se presupone a cualquier co-misioacuten de estas caracteriacutesticas De este modo se pondriacutean en comuacuten los resultados de la vigilancia y seguimiento ambiental en cada fase asiacute como la po-sible necesidad de plantear nuevas medidas correc-toras disponiendo para la discusioacuten las soluciones maacutes apropiadas en funcioacuten del criterio de todos los especialistas implicados en las distintas fases del ciclo de vida del proyecto

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Figura 12 El estudio de la eficacia de algunas medidas correctoras durante la fase de explotacioacuten como los diferentes disentildeos de dispositivos de escape para la fauna incluidos en estas dos imaacutegenes seriacutean tareas propias del PS (Foto Carlos Iglesias)

IV ALCANCE Y CONTENIDO GENERAL DE LOS PVA Y DE LOS PS

La realizacioacuten del seguimiento se basa en la for-mulacioacuten de paraacutemetros que proporcionan la for-ma de estimar de manera cuantificada y simple en la medida de lo posible la realizacioacuten de las me-didas previstas y sus resultados pueden existir por tanto dos tipos de paraacutemetros indicadores si bien no siempre los dos tienen sentido para todas las medidas por lo que se propone la redaccioacuten de PVA y PS cuya diferencia fundamental reside en

bull PVA se estableceraacuten indicadores de reali-zacioacuten que miden la aplicacioacuten y ejecucioacuten efectiva de las medidas correctoras

bull PS se estableceraacuten indicadores de eficacia que miden los resultados obtenidos con la aplicacioacuten de la medida correctora correspon-diente

1 Contenido del PVA en el proyecto de construccioacuten

El PVA se trata de un documento de caraacutecter abierto que durante el transcurso de la obra debe permitir la deteccioacuten de nuevas afecciones o impactos no previstos anteriormente para los que debe prever alguna respuesta en forma de adopcioacuten de nuevas medidas preventivas o correctoras Ademaacutes el PVA ha de concretar todas las operaciones de control y vigilancia del proyecto tanto espacial como tempo-ralmente y se tendraacute que adaptar continuamente

a los requerimientos del proyecto para alcanzar la maacutexima eficacia

Cuadro 10 Exigencia legal (art 11 del RD 11311988)

hellip El programa de vigilancia ambiental estableceraacute un sistema que garantice el cumplimiento de las indicaciones y medidas protectoras y correctoras contenidas en el estudio de impacto ambiental

El principal objetivo del PVA en el esquema director propuesto se ajusta a las metodologiacuteas habitual-mente desarrolladas para garantizar que el proyec-to sometido a control se desarrolle cumpliendo con los condicionantes ambientales emanados de la DIA y por lo general los sistemas establecidos en el proyecto permiten detectar cualquier desviacioacuten en obra o incluso impactos no previstos con anteriori-dad Sin embargo el modo en que se implementa el PVA y cierta desautorizacioacuten praacutectica de los teacutecni-cos implicados en vigilancia ambiental como conse-cuencia de su posicioacuten en el esquema de los actores que habitualmente intervienen en obra constituyen la principal debilidad del actual modelo Por este motivo seriacutea deseable la existencia de una comisioacuten mixta en la que se verifique cada hito y queden de manifiesto las responsabilidades e informes de cada parte implicada

Figura 13 La limpieza final y durante la obra en el entorno de las obras de drenaje es un punto de particular atencioacuten del PVA (izquierda) Acopios de tierra vegetal dispuestos en el periacutemetro de la ocupacioacuten de la obra (derecha) (Foto Carlos Iglesias)

Cuadro 11 Objetivos habitualmente incluidos en el PVA de un proyecto de construccioacuten

bull Controlar la correcta ejecucioacuten de las medidas de integracioacuten ambiental proyectadas y su adecuacioacuten a los criterios establecidos en la DIA

bull Detectar impactos no previstos en el EsIA y plantear las oportunas medidas protectoras correctoras etc

bull Verificar los estaacutendares de calidad de los materiales (tierra plantas agua etc) y medios propuestos en el proyecto de construccioacuten

bull Comprobar la efectividad de las medidas ejecutadas y en caso de ineficacia determinar las posibles causas y propuesta de soluciones

bull Valorar y proporcionar informacioacuten acerca de la calidad y oportunidad de las medidas protectoras yo correctoras yo compensatorias ejecutadas

bull Informar al oacutergano competente (y a la CMCC cuando proceda) sobre los aspectos objeto de vigilancia y ofrecerle un meacutetodo sistemaacutetico lo maacutes sencillo y econoacutemico posible para realizar la vigilancia de una forma eficaz

bull Establecer el tipo de informes su frecuencia y el procedimiento de remisioacuten al oacutergano competente y cuando proceda a la CMCC

bull Establecer un protocolo de funcionamiento vaacutelido con el papel previsto para cada actor que permita adoptar nuevas medidas no contempladas en el proyecto o modificar sustancialmente las proyectadas

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En el PVA deben quedar organizados los diferentes aacutembitos de control lo que podriacutea realizarse agru-pando la informacioacuten por variables ambientales (agua aire vegetacioacuten fauna etc) y las medidas dedicadas a cada una de ellas o seguacuten su incidencia sobre diferentes acciones de la obra (excavaciones instalaciones rutas etc)

Para cada accioacuten de control que se defina se habraacute de definir como miacutenimo

bull Metodologiacutea y sistemas de control (visual muestreos etc) asiacute como el personal y los materiales a utilizar en cada caso

bull Frecuencia y momento de aplicacioacuten se de-finiraacute el momento de inicio asiacute como el pe-riodo en el que se realizaraacute el control y su periodicidad

bull Alcance se debe indicar en queacute circunstancias se tiene que realizar el control y definirse la unidad de referencia

bull Indicadores ambientales y niveles de refe-rencia en los casos en que se definan se deben establecer los paraacutemetros de referen-cia y los valores umbrales con indicacioacuten expresa de la normativa vigente cuando proceda

Para implementar lo anterior lo maacutes habitual es que la DAO se dote de una asistencia teacutecnica En

cualquier caso con recursos propios o mediante asistencia teacutecnica en obra se necesita estimar de alguacuten modo la realizacioacuten de las medidas previstas en proyecto y en ocasiones los re-sultados de las que en ese momento se puedan valorar Para ello suelen establecerse dos tipos de paraacutemetros indicadores si bien no siempre los dos tienen sentido para todas las medidas a vigilar

bull Indicadores de realizacioacuten en obra permiten me-dir o estimar la aplicacioacuten yo ejecucioacuten de una medida protectora yo correctora yo compensato-ria

bull Indicadores de eficacia permiten medir o esti-mar cualitativamente la funcionalidad de las me-didas protectoras yo correctoras yo compensa-torias

De los valores de estos indicadores el sistema de vigilancia debe permitir la adopcioacuten de nuevas me-didas correctoras o la repeticioacuten de las aplicadas Por este motivo los indicadores van acompantildeados de umbrales de alerta que advierten de la existen-cia de una no conformidad o de ineficacias reales o potenciales

Si el modelo en el que se desarrolla la vigilancia ambiental no permite lo anterior la vigilancia seraacute ineficaz en siacute misma independientemente del con-tenido del propio PVA la calidad del proyecto y el procedimiento de EIA precedentes

Cuadro 12 Cronologiacutea habitual de los informes que se deben realizar en la obra de una infraestructura de transporte

bull Antes del inicio de las obras

Sirve para verificar la adecuacioacuten del proyecto de construccioacuten a la DIA extractar el PVA del proyecto y adecuarlo a la realidad del momento y suele tener la pretensioacuten de incorporar el PAC del contratista para crear un documento de referencia con todos ellos

bull Paralelo al acta de comprobacioacuten del replanteo

Sirve para constatar la delimitacioacuten definitiva de todas las aacutereas afectadas por la obra y sus elementos auxiliares verificar la situacioacuten de los principales valores de los indicadores sobre jalonamiento de las obras para su revisioacuten por exceso o defecto de los valores umbral etc Momento en el que tambieacuten suele tenerse la pretensioacuten de que el contratista presente un lsquomanual de buenas praacutecticas ambientales en obrarsquo

bull Informes perioacutedicos durante la fase de obras

En funcioacuten del promotor suele establecerse una frecuencia variable para la remisioacuten de una serie de informes perioacutedicos ordinarios cuya principal finalidad es documentar y recopilar las incidencias acontecidas durante ese tiempo

bull Informes especiales

Con independencia de los anteriores se suele contemplar la emisioacuten de informes especiales cuando se presenten situaciones o circunstancias que justifiquen su comunicacioacuten urgente a los distintos responsables de la obra Lo normal es que en el propio PVA se indiquen los asuntos que puedan requerir una atencioacuten particular

bull Antes del acta de recepcioacuten de la obra

Lo ideal seriacutea que el informe anterior al acta de recepcioacuten de la obra se compusiera de una serie de informes especiacuteficos sobre cada variable ambiental y las medidas preventivas yo correctoras yo compensatorias establecidas en cada caso incluyendo su valoracioacuten hasta la fecha

2 Contenido del PS a medio y largo plazo

El programa de seguimiento (PS) se define como aquel que permite extender el control de la eficacia de las medidas ambientales con posterioridad a la recepcioacuten de la obra durante un plazo inicialmente estimado de 3 a 10 antildeos para estudiar la evolucioacuten de su eficacia y funcionalidad asiacute como el segui-miento y deteccioacuten de nuevos impactos no previstos en fases previas Como se ha sentildealado con anterio-ridad el seguimiento a medio y largo plazo busca recopilar datos y generar informacioacuten uacutetil sobre la evolucioacuten de las medidas correctoras asiacute como su incidencia sobre el entorno de la infraestructura

El programa de seguimiento tendriacutea un componen-te maacutes cientiacutefico que teacutecnico (al menos en lo que se refiere al estudio de las variables monitorizadas) y en el escenario propuesto permitiriacutea estrechar el contacto con el mundo acadeacutemico asiacute como impul-sar las divisiones de I+D+i (Investigacioacuten + Desarro-llo + innovacioacuten) del sector privado En coherencia con los apartados anteriores de este capiacutetulo el PS

deberiacutea incluirse en un anejo especiacutefico del proyec-to junto con la justificacioacuten del cumplimiento de la DIA y el PVA y su presupuesto deberiacutea quedar detallado en el presupuesto de inversioacuten

Recepcioacuten de la obra

Antildeo 0 1 2 3 4 5 6

P GARANTIacuteA

Figura 15 El PS se empezariacutea a aplicar en el mismo momento de recepcioacuten de la obra y su duracioacuten puede exceder ampliamente el periacuteodo de garantiacutea de la misma Ademaacutes el seguimiento de cada medida correctora o variable ambiental que se debe monitorizar puede tener diferente duracioacuten

La primera parte de la fase de funcionamiento se so-lapa con el periacuteodo de garantiacutea de la obra por lo que la deteccioacuten raacutepida de cualquier desviacioacuten de las me-didas correctoras sobre lo previsto inicialmente auacuten podriacutea ser teoacutericamente rectificada No obstante en este momento ya no rige el proyecto de construccioacuten por lo que se propone la necesidad de implementar

Figura 14 La imagen de la izquierda muestra el hueco existente en la base del cerramiento de una infraestructura lo que incrementa el riesgo de atropello de fauna en la fase de explotacioacuten (Foto Carlos Iglesias) La imagen de la derecha ilustra una solucioacuten al anterior inconveniente (Foto Xavier Artigas)

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un PS como extensioacuten del PVA durante la fase de funcionamiento con nuevos responsables y maacutergenes de actuacioacuten Por ello teniendo en cuenta la realidad de las Administraciones y de las empresas implicadas en el aacutembito de las infraestructuras de transporte se propone el esquema desarrollado en este capiacutetulo aprovechando la capacidad del operador para desem-pentildear tareas de seguimiento que en muchos casos ya realizan como parte de su propio PAC

Sin embargo teniendo en cuenta la composicioacuten de la CMCC que tambieacuten se propone en este

capiacutetulo (Figura 11) en lo que concierne a las me-didas relacionadas con el procedimiento de EIA dichas tareas de seguimiento estariacutean sometidas al control puacuteblico de las administraciones respon-sables y al control teacutecnico de las empresas cons-tructoras y de ingenieriacutea participantes en las fases anteriores De esta manera toda la informacioacuten quedariacutea inmediatamente recopilada por el oacutergano competente en materia de vigilancia y seguimien-to y por otro lado los resultados obtenidos ten-driacutean una aplicabilidad directa sobre las medidas que habiacutea que considerar en futuros proyectos

Cuadro 13 Debido a las caracteriacutesticas de la fase de explotacioacuten cronologiacutea posible de informes de seguimiento en infraestructuras de transporte

bull Posterior a la recepcioacuten de la obra

Establece el estado de recepcioacuten de la obra en lo concerniente a las medidas preventivas yo correctoras yo compensatorias ejecutadas

bull Informes perioacutedicos durante el periacuteodo de garantiacutea

En funcioacuten de la variable a seguir o de la medida analizada se estableceraacute la frecuencia de remisioacuten de informes perioacutedicos ordinarios cuyos resultados puedan dar lugar a reclamaciones a los contratistas con motivo de la garantiacutea de obra

bull Informes semestrales yo anuales

En funcioacuten de la variable a seguir o de la medida analizada se estableceraacute la frecuencia de remisioacuten de informes perioacutedicos ordinarios cuyo periacuteodo de emisioacuten maacutes habitual seriacutea semestral o anual

bull Informes especiales

Con independencia de los anteriores se contempla la emisioacuten de informes especiales cuando se presenten situaciones o circunstancias que justifiquen su comunicacioacuten urgente a los distintos responsables de la obra

bull Informe final de seguimiento ambiental

En funcioacuten de la duracioacuten del seguimiento de cada variable ambiental o de la medida analizada se elaboraraacute un informe final de seguimiento en el que se incluyan las principales conclusiones aprendizajes yo recomendaciones que se podriacutean extraer de cara a su consideracioacuten en futuros proyectos y procedimientos de EIA

V CONTENIDO TEacuteCNICO DE LOS PVA Y PS

1 Hacia la actualizacioacuten de los PVA y PS

Como se ha podido comprobar en los capiacutetulos pre-cedentes la informacioacuten volcada en este libro es muy reciente a la par que novedosa Gran parte de esta informacioacuten la componen resultados y con-clusiones de artiacuteculos cientiacuteficos publicados recien-temente en prestigiosas revistas internacionales ademaacutes se ha adelantado informacioacuten todaviacutea no publicada que formaraacute parte de artiacuteculos cientiacutefi-cos bien porque estaacuten en proceso de publicacioacuten (artiacuteculos en prensa) bien porque se trata de re-sultados todaviacutea no publicados (ineacuteditos) Este es-fuerzo de revisioacuten y actualizacioacuten se debe en gran medida a que la mayoriacutea de losas autoresas del libro son miembros de los equipos de investigacioacuten que estaacuten dirigiendo yo participando en distintos proyectos de investigacioacuten en este aacutembito Por lo tanto se puede afirmar que la liacutenea de investiga-cioacuten en nuestro paiacutes progresa a buen ritmo y a un gran nivel reconocido internacionalmente

Para que estos resultados de investigacioacuten se inte-gren en los procesos productivos de los distintos actores que participan del ciclo de vida de las in-fraestructuras de transporte lineales es necesario abordar el desarrollo e innovacioacuten de nuevos pro-ductos y procesos a partir de estos resultados tal y como marca el proceso habitual de la I+D+i En este sentido y dado que es un proceso necesariamente posterior a la investigacioacuten todaviacutea estamos en un estadio temprano como para proponer los suficien-tes indicadores valores umbral de los mismos asiacute como medidas complementarias que permitan ga-rantizar y optimizar los resultados de las medidas correctoras propuestas El contenido teacutecnico de los PVA y PS que se avanzan a continuacioacuten se plan-tean como ejemplos de toda una bateriacutea de innova-ciones que deben producirse a corto y medio plazo en este aacutembito

2 Contenido teacutecnico del PVA indicadores de realizacioacuten en obra

A continuacioacuten se incluye un ejemplo de la incor-poracioacuten progresiva de nuevos conocimientos para la definicioacuten de los paraacutemetros maacutes importantes que podriacutean ser controlados por un PVA durante la ejecucioacuten de las obras de una infraestructura de transporte

Ejemplo calidad del suelo para la restauracioacuten de la cubierta vegetal

La mayoriacutea de los factores relacionados con los as-pectos cualitativos del suelo para la restauracioacuten de la cubierta vegetal poseen en comuacuten que el momento idoacuteneo para su control coincide con la construccioacuten del talud Puesto que una vez fina-lizada la obra es difiacutecil corregir cualquier aspecto del suelo que perjudique la restauracioacuten del talud a excepcioacuten de la fertilizacioacuten (veacutease capiacutetulo 7) no se incluyen indicadores de eficacia para el PS recogieacutendose como principales indicadores de rea-lizacioacuten los siguientes

Identificacioacuten de la medida correctora evaluacioacuten previa de los factores edaacuteficos que limitan el desarrollo de la vegetacioacuten

bull Factor agua disponible para las plantas

Objetivo analizar la relacioacuten entre los aportes y las peacuterdidas de agua el balance final deter-minaraacute la cantidad de agua disponible para la vegetacioacuten

Indicador balance entre aportes (precipitacio-nes y surgencias) peacuterdidas (escorrentiacutea en el talud) y capacidad de retencioacuten por parte del talud (pendiente compactacioacuten y textura del suelo microtopografiacutea contenido en materia orgaacutenica)

Frecuencia de la medida una sola vez durante la construccioacuten del talud

Valor umbral aunque este valor umbral de-penderaacute del nivel de compactacioacuten y la tex-tura del suelo en suelos maacutes compactados y arcillosos las pendientes tendraacuten que ser menores que en suelos arenosos y menos compactados (veacutease Capiacutetulo 2)

Momentos de anaacutelisis del valor umbral al fi-nalizar la construccioacuten del talud

bull Factor reciclado de nutrientes

Objetivo crear sistemas autosuficientes a lar-go plazo evitar los tratamientos perioacutedicos de fertilizacioacuten

Figura 16 El seguimiento de los pasos de fauna especiacuteficos (autoviacutea A-52 a la izquierda y autoviacutea M-501 a la derecha) en fase de explotacioacuten combinariacutea al menos el estudio de su eficacia sobre la permeabilidad fauniacutestica de la infraestructura y la evolucioacuten de la cubierta vegetal en su superficie (Foto TEG-UAM)

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IacuteNDICE

Indicador existencia de tierra vegetal rela-cioacuten carbononitroacutegeno (CN) actividad bioloacute-gica del suelo

Frecuencia de la medida una sola vez durante la construccioacuten del talud

Valor umbral no existe valor umbral para la tierra vegetal se debe potenciar su conser-vacioacuten en la mayor parte de la superficie del talud

Momentos de anaacutelisis del valor umbral al fi-nalizar la construccioacuten del talud

bull Factor pH

Objetivo evitar pH y valores de salinidad demasiado alejados de los que se pueden encontrar en el entorno no afectado por mo-vimiento de tierras o en espacios con vegeta-cioacuten natural proacuteximos

Indicador anaacutelisis del pH y la salinidad del suelo

Frecuencia de la medida una sola vez durante la construccioacuten del talud

Valor umbral normalmente el pH se deberiacutea encontrar entre 45 y 85 aunque esto va a depender del tipo de suelo del entorno no afectado y de la existencia de flora singular que sea de intereacutes introducir en el talud como especialistas edaacuteficas o de suelos salinos

Momentos de anaacutelisis del valor umbral al fi-nalizar la construccioacuten del talud

3 Contenido teacutecnico del PS indicadores de seguimiento en fase de explotacioacuten

A continuacioacuten se incluye un ejemplo aplicable al seguimiento del recubrimiento vegetal despueacutes de ejecutada la obra durante las labores de conserva-cioacuten y mantenimiento de la infraestructura y de la estabilidad de la superficie de un talud mediante el funcionamiento ecosisteacutemico del mismo en su fase de explotacioacuten

a Identificacioacuten de la medida correctora recubrimiento vegetal

bull Objetivo asegurar suficiente cobertura vege-tal para evitar procesos erosivos Integracioacuten

paisajiacutestica Mejora del funcionamiento eco-sisteacutemico del talud

bull Indicador cobertura vegetal

bull Frecuencia de la medida 2 veces al antildeo du-rante los primeros 5 antildeos En abrilmayo (se-guacuten la zona) momento de maacuteximo desarrollo vegetal y en julio momento de miacutenima co-bertura anual

bull Valor umbral 55 de cobertura mediante meacutetodo de punto-contacto (Andreacutes y Jorba 2000 El meacutetodo se explica maacutes adelante)

bull Momentos de anaacutelisis del valor umbral abrilmayo Aunque depende del tipo de talud y la bioclimatologiacutea normalmente si esta cober-tura baja de un miacutenimo del 50 durante el verano habriacutea que tomar medidas

bull Medida complementarias porcentaje de espe-cies perennes riqueza de especies y domi-nancia (iacutendice de Berger-Parker)

bull Observaciones el meacutetodo del punto-contacto es un meacutetodo que permite muestrear cobertura y diversidad de especies de una forma raacutepida y faacutecil Se estableceraacuten entre 3 y 5 transectos por cada zona de seguimiento (tres zonas de seguimiento por cada tipo de talud desmonte o terrapleacuten y cada tipo de suelo y clima) Es-tos transectos se realizan con la ayuda de una cinta meacutetrica la cual se colocaraacute a partir de 5 m desde la cabecera del talud y hasta 5 m del final del mismo (zona tampoacuten Figura 17) Una vez colocadas las cintas se trata de anotar cada 10 cm de esta cinta queacute tipo de vege-tacioacuten contacta con la cinta (suelo desnudo vegetacioacuten muerta o la especie vegetal en concreto) Para ello nos podemos ayudar de una barra riacutegida la cual colocaremos de forma vertical a la cinta meacutetrica aquello que toque con la barra seraacute lo que anotemos Una vez finalizados los transectos se trata de calcular mediante sencillas reglas de tres el porcen-taje de cobertura vegetal (viva y muerta) y el porcentaje de cobertura ocupado por cada especie Con estos datos tambieacuten podremos calcular iacutendices de diversidad (recomendamos el iacutendice de Hulbert 1971 probabilidad de un encuentro interespeciacutefico (del ingleacutes PIE pro-bability of interspecific encounter) porcentaje de especies perennes (mediante las mismas reglas de tres una vez identificadas cuaacuteles de

estas especies son perennes y calculando el porcentaje basaacutendose en a aquellos contac-tos con especies vegetales eliminando suelo

Figura 17 Descripcioacuten del meacutetodo punto-contacto

bull Observaciones

La probabilidad de un encuentro inter-especiacute-fico (PIE Hulbert 1971) es igual a

donde N es el nuacutemero total de contactos de espe-cies vegetales vivas encontrados S es el nuacutemero de especies encontradas y p

i es la proporcioacuten del

total de individuos representados por cada espe-cie en concreto Si este iacutendice es muy bajo (lt02) se deberaacuten tomar medidas para aumentar la di-versidad (pe plantacioacuten de lentildeosas herbicidas selectivos o fertilizacioacuten con C dependiendo del caso Veacuteanse Capiacutetulos 6 y 7 de este libro)

El iacutendice de Berger-Parker es un meacutetodo de faacutecil caacutelculo complementario al PIE descrito anteriormente que nos permitiraacute conocer la existencia de especies extremadamente domi-nantes que puedan comprometer el desarrollo del proceso sucesional del talud y el eacutexito de otras medidas correctoras (Garciacutea-Palacios et al 2010) Aprovechando los datos del meacute-todo punto-contacto anteriormente descrito podemos calcularlo sin ninguacuten esfuerzo extra

El iacutendice de Berger-Parker es igual a NmaxN siendo Nmax el nuacutemero de contactos de la especie maacutes abundante y N el nuacutemero total de contactos (aquiacute solo contaremos aque-llos contactos de especies vivas eliminan-do aquellos de suelo desnudo o vegetacioacuten muerta) localizados en el transecto Si este iacutendice es mayor de 05 deberiacuteamos aplicar

1 Establecer transecto

2 Anotar queacute encontramos cada 10 cm

3 Ayudarnos de una barra riacutegida para ver queacute se cruza con el transecto

Liacutenea de transecto (en rojo)

Superficie de talud

5 m (zona tampoacuten)

5 m (zona tampoacuten)

desnudo) y el iacutendice de dominancia (recomen-damos el iacutendice de Berger-Parker explicado maacutes adelante)

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IacuteNDICE

medidas correctoras (uso de herbicidas es-peciacuteficos fertilizacioacuten con C (veacutease Capiacutetulo 7)

b Identificacioacuten de la medida correctora funcionamiento ecosisteacutemicoestabilidad del talud

bull Objetivo identificar el grado de eacutexito del pro-ceso de restauracioacuten

bull Indicador meacutetodo LFA (landscape functional analysis)

bull Frecuencia de la medida dos veces por antildeo

bull Valor umbral el meacutetodo genera tres iacutendices de funcionamiento No existen valores umbral concretos el gestor deberaacute tratar de que es-tos iacutendices sean lo maacutes altos posibles y so-bre todo de que aumenten cada antildeo Esta es una medida integrativa muy buena del eacutexito del proceso de restauracioacuten

bull Momentos de anaacutelisis del valor umbral abrilmayo

bull Medidas complementarias dependiendo de doacutende identifiquemos el fallo aplicaremos di-ferentes medidas correctoras (veacutease bibliogra-fiacutea recomendada y Capiacutetulo 7)

bull Observaciones la descripcioacuten detallada de esta metodologiacutea se encuentra en httpwwwcsiroauservicesEcosystemFunctionAnalysishtml o en httpwwwrevistaecosistemasnetrevista_frameasppagina=2Farticuloasp3FId3D8826Id_Categoria3D126tipo3Dportada (para una breve descripcioacuten en espantildeol) No obstante se ofrece en este libro un pequentildeo resumen intro-ductorio

Esta metodologiacutea se basa en la existencia de fuentes y sumideros de recursos Las fuen-tes en este caso son los espacios libres de vegetacioacuten (suelo desnudo) los cuales gene-ran escorrentiacutea cuando llueve permitiendo el transporte de agua y nutrientes (y la peacuterdida de suelo asociada) hasta zonas donde se re-tiene este flujo de sedimentos (los sumide-ros) Estos sumideros estaacuten formados bien por la vegetacioacuten existente o por estructuras inertes (restos de ramas rocas relieves del terreno) que retienen parte del flujo de agua y nutrientes procedentes de las aacutereas de suelo desnudo cercanas (Figura 18)

Figura 18 Ilustracioacuten de zonas fuente y aportacioacuten de sedimentos (flechas azules) y zonas sumidero y retencioacuten de sedimentos (en rojo)

Esta metodologiacutea se basa en dos partes principa-les la realizacioacuten de transectos donde se identi-fican las clases de parches (o sumideros) que te-nemos y la caracterizacioacuten de cada uno de estos parches (incluyendo las zonas fuente)

TRANSECTOS

En estos transectos cuantificamos median-te un meacutetodo muy similar al punto-contacto (descrito anteriormente) doacutende se encuen-tran estos parches la distancia entre ellos y su tamantildeo Para ello el inventor de este meacutetodo (David Tongway) nos facilita en su paacutegina web una hoja de caacutelculo de Excel que nos calcularaacute automaacuteticamente estas varia-bles una vez introducidos los datos del tran-secto (Figura 19)

CARACTERIZACIOacuteN

En esta parte nos encargaremos de cuanti-ficar las caracteriacutesticas principales de estos parches mediante 11 variables de raacutepida me-dicioacuten Esta variables nos permiten calcular los tres iacutendices de funcionamiento que nos da este meacutetodo (se calculan con la misma hoja de caacutelculo Excel descrita anteriormente) daacutendonos un valor de funcionamiento para el talud muestreado Realizando este meacutetodo en tres taludes de cada tipo (desmonte o terra-pleacuten) por cada zona compartiendo el mismo tipo de suelo y clima obtendremos una me-dida muy buena del eacutexito de las diferentes medidas de restauracioacuten realizadas y su eacutexito en cada tipo concreto de talud al que nos en-frentamos en la infraestructura vial completa La Tabla 1 resume las medidas que tendremos que hacer y para queacute iacutendices se utilizan

Figura 19 Representacioacuten de transecto donde se identifican distintos tipos de parches sumidero asiacute como su anchura Veacutease la metodologiacutea detallada en httpwwwcsiroauservicesEcosystemFunctionAnalysishtml

(a) Grasses with ring formation

DOWNSLOPE

Patch length

NB Soil inside ring doesnot comprise inter-patch

Patch length

Obstruction width

Obstruction width(must be in contact with the soil)

(b) Clumps of grassesEither growing closely together or connected with litter bridgesAlso includes situation whereTape crosses a litter bridge

Patch length

Patch length

Obstruction width

(c)Log

TAPE

Patch length

Obstruction width

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IacuteNDICE

Tabla 1Resumen de las variables que hay que medir en cada tipo de parche la lectura bioloacutegica que obtenemos de ellas y para cuaacutel de los tres iacutendices que nos da la metodologiacutea LFA se utiliza

VARIABLE SIGNIFICADO IacuteNDICE EN EL QUE SE UTILIZA

Cobertura totalVulnerabilidad a la erosioacuten y peacuterdida de suelo por el impacto de gotas de lluvia

Estabilidad

Cobertura basal de especies herbaacuteceas y arbustivas

Evaluacutea la contribucioacuten de la biomasa de raiacuteces a los procesos de reciclaje de nutrientes

Infiltracioacuten

Reciclaje de nutrientes

Cobertura de hojarasca origen y grado de descomposicioacuten

Indica la cantidad y calidad de la materia orgaacutenica

Infiltracioacuten

Reciclaje de nutrientes

Cobertura de costra

bioloacutegica (formada por

cianobacterias musgos y

liacutequenes)

Indicador de la estabilidad de la superficie del suelo de su resistencia a la erosioacuten y de la disponibilidad de nutrientes

Reciclaje de nutrientes

Grado de fragmentacioacuten de

la costra

Mide la cantidad de costra superficial disponible para la erosioacuten hiacutedrica o eoacutelica

Estabilidad

Tipo y grado de erosioacutenEstima la naturaleza y gravedad de los procesos erosivos actuales

Estabilidad

Materiales depositadosEvaluacutea la cantidad de depoacutesitos aluviales

Estabilidad

Microtopografiacutea

Indicador de la rugosidad de la superficie del suelo basada en su capacidad para retener agua sedimentos y semillas

Infiltracioacuten

Reciclaje de nutrientes

Resistencia a la

perturbacioacutenEstima la probabilidad de perder suelo por una perturbacioacuten mecaacutenica

Estabilidad

Test de humectacioacutenEvaluacutea la estabilidaddispersioacuten de los agregados del suelo cuando estaacute huacutemedo

Estabilidad

Infiltracioacuten

TexturaIndicador de la capacidad de infiltracioacuten y almacenamiento de agua

Estabilidad

Modificado de Tongway et al 2004 Veacutease metodologiacutea detallada en httpwwwcsiroauservicesEcosys-temFunctionAnalysishtml

VI PREGUNTAS CLAVE

iquestEs lo mismo seguimiento y vigilancia ambiental

Aunque la legislacioacuten actual no los diferencia conceptualmente no es lo mismo seguimiento que vigilancia ambiental La existencia de diferentes actores en las fases de construccioacuten y explotacioacuten de infraestructuras de transporte hace recomen-dable desarrollar ambas actividades en la legis-lacioacuten baacutesica no solo desde la perspectiva de la disciplina y responsabilidad ambiental sino por su potencial impliacutecito para actualizar y consoli-dar el conocimiento teacutecnico y cientiacutefico de cada momento

iquestPuede el contratista vigilarse a siacute mismo

Con independencia del oacutergano competente en materia de seguimiento y vigilancia ambiental el contratista no debe asumir la vigilancia ambiental de su propia obra en ninguacuten caso

iquestDebe incluirse el presupuesto del PVA en el presupuesto de ejecucioacuten material (PEM) del proyecto

En ninguacuten caso el PVA debe formar parte del PEM del proyecto puesto que no es una actividad que deba realizar el contratista sino el oacutergano respon-sable con personal propio o mediante asistenta teacutecnica El lugar adecuado para valorar su coste econoacutemico es el presupuesto de inversioacuten antes denominado presupuesto para conocimiento de la Administracioacuten

iquestPuede un operadoradministrador implementar el PS de su propia infraestructura

Teniendo en cuenta la limitacioacuten de recursos de la Administracioacuten como demuestra la experien-cia de estos 25 antildeos de evaluacioacuten ambiental es recomendable aprovechar el PAC del operadoradministrador por su complementariedad y dupli-cacioacuten en ocasiones con las tareas propias del seguimiento ambiental en fase de explotacioacuten Debido a la componente cientiacutefica de esta fase y la necesidad de reportar a una CMCC ya fuera con recursos propios o ajenos previsiblemente res-paldariacutea el desarrollo de la I+D+i en las empresas yo potenciariacutea la colaboracioacuten con instituciones acadeacutemicas y de investigacioacuten

iquestDebe incluirse el presupuesto del PS en el PEM del proyecto

En ninguacuten caso el PS debe formar parte del PEM del proyecto puesto que no es una actividad que deba realizar el contratista de la obra sino el oacuter-gano responsable con personal propio o mediante asistenta teacutecnica Quizaacutes en el futuro pueda ser desarrollado por el operadoradministrador de la infraestructura reportando a la CMCC de acuerdo con la propuesta elaborada en este libro El lugar adecuado para la valoracioacuten de su coste econoacutemi-co es el presupuesto de inversioacuten

iquestPor queacute el seguimiento arqueoloacutegico en ocasiones se incluye en el PEM del proyecto

No deben confundirse los procedimientos admi-nistrativos en relacioacuten con el patrimonio cultural que en ocasiones por la operativa de las obras obliga a que el propio contratista gestione las au-torizaciones con las consejeriacuteas correspondientes y se ve obligado a realizar una serie de trabajos previos (prospecciones arqueoloacutegicas sondeos etc) con personal propio o contratado con la cualificacioacuten exigida por las administraciones competentes Estas otras actividades relaciona-das con la obtencioacuten de algunos permisos admi-nistrativos por parte del promotor yo contratista suponen un coste con elevada probabilidad de ser asumido por este uacuteltimo y por inercia con frecuencia suele incluirse el seguimiento arqueo-loacutegico de las obras como una maacutes de estas activi-dades en el PEM Sin embargo no es loacutegico que la vigilancia en obra arqueoloacutegica o de cualquier otra naturaleza sea dirigida por el contratista ni que se incluya como una unidad del PEM Aunque es una materia especiacutefica no tratada en este libro a semejanza de cualquier otro factor ambiental el seguimiento arqueoloacutegico podriacutea formar parte del PVA y valorarse en el presupuesto de inversioacuten

iquestPuede intervenir en el PS el mismo equipo que en el PVA

Tanto el PS como el PVA deben llevarlo a cabo especialistas en cada variable ambiental o medi-da correctora y la participacioacuten en una de las fases no tiene por queacute inhabilitar a un equipo para poder participar en la otra si su cualificacioacuten es adecuada

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IacuteNDICE

VII CONCLUSIONES

La vigilancia y el seguimiento de las actividades y proyectos sometidos a EIA forman parte del pro-cedimiento por tanto no es bueno que el oacutergano ambiental se desligue en ninguna fase del mismo como la praacutectica demuestra que viene sucediendo en determinados proyectos y Administraciones

A pesar del trascurso de los antildeos sigue existiendo mu-cha distancia entre la teoriacutea de los modelos multidiscipli-nares y participativos y su aplicacioacuten praacutectica y deberiacutean aprovecharse las mejores experiencias conocidas para introducir mejoras en los protocolos de funcionamiento

El elevado nivel de detalle de las medidas correcto-ras de impacto ambiental y de los PVA incluidos en los proyectos de construccioacuten carece de eficacia si no se implementan con el mismo nivel de exigencias y supervisioacuten que la redaccioacuten de los proyectos

La dispersioacuten de la informacioacuten y documentos ema-nados de la fase de seguimiento y vigilancia am-biental es una debilidad del sistema que requiere

corregirse La creacioacuten de comisiones mixtas en di-cha fase permitiriacutea el acceso aacutegil a los resultados facilitando que el procedimiento se nutra de datos reales y verificados

La consideracioacuten de principios de economiacutea ambien-tal aplicados a la optimizacioacuten de los recursos puacute-blicos y privados hace recomendable promover la interrelacioacuten entre los procesos de calidad de las empresas con la EIA poniendo en valor los que re-sulten complementarios

La retroalimentacioacuten de los procesos permitiriacutea in-troducir mejoras funcionales en el disentildeo de las me-didas correctoras de impacto ambiental reforzando directamente la utilidad del procedimiento de EIA Para solventar la actual falta de acceso por parte de los propios actores a los datos teoacutericamente exis-tentes por casi 25 antildeos de vigilancia y seguimiento ambiental en Espantildea se percibe que la creacioacuten de comisiones multidisciplinares resultariacutea una herra-mienta aacutegil y eficaz

VIII BIBLIOGRAFIacuteA

Andreacutes P y M Jorba 2000 Mitigaction strategies in some motorway embarkments (Catalonia Spain)

Arce Ruiz RM A Goacutemez Saacutenchez A y N Aizpuruacutea Giraacuteldez N 2006 Anaacutelisis de las medidas preventi-vas correctoras y compensatorias de las infraestruc-turas lineales del transporte desde el punto de vista de las ingenieriacuteas y constructoras III Congreso de Ingenieriacutea Civil Territorio y Medio Ambiente lsquoAgua Biodiversidad e Ingenieriacutearsquo Zaragoza 25-27 de oc-tubre de 2006

BOCM 2002 Ley 22002 de 19 de junio de Evalua-cioacuten Ambiental de la Comunidad de Madrid Boletiacuten Oficial de la Comunidad de Madrid nordm 154 del lunes 1 de julio de 20026-27

BOE 1988 Real Decreto 11311988 de 30 de sep-tiembre por el que se aprueba el Reglamento para la ejecucioacuten de Real Decreto Legislativo 13021986 de 28 de junio de Evaluacioacuten de Impacto Ambiental Boletiacuten Oficial del Estado nordm 239 del mieacutercoles 5 de octubre de 198828911-28916

BOE 2008 Real Decreto Legislativo 12008 de 11 de enero por el que se aprueba el texto refundido de

la Ley de Evaluacioacuten de Impacto Ambiental de pro-yectos Boletiacuten Oficial del Estado nordm 23 del saacutebado 26 enero 20084986-5000

BOE 2010 Ley 62010 de 24 de marzo de modifi-cacioacuten del texto refundido de la Ley de Evaluacioacuten de Impacto Ambiental de proyectos aprobado por el Real Decreto Legislativo 12008 de 11 de enero Boletiacuten Oficial del Estado nordm 73 del jueves 25 de marzo de 201028590-28597

DOCM 2005 Orden de 26-01-2005 de la Conse-jeriacutea de Medio Ambiente por la que se regula la autorizacioacuten a entidades y profesionales para el seguimiento y control de actividades sometidas a evaluacioacuten de impacto ambiental Diario Oficial de Castilla-La Mancha nordm 24 del 3 de febrero de 20051922-1926

Garciacutea-Palacios P S Soliveres FT Maestre A Es-cudero F Valladares y AP Castillo-Monroy 2010 Dominant plant species modulates responses to hydroseeding irrigation and fertilization during the restoration of semiarid motorway slope Ecological Engineering 361290-1298

Gil Esteban LM 2006 Experiencias en programas de vigilancia ambiental en obras lineales Fase de ejecucioacuten III Congreso de Ingenieriacutea Civil Territorio y Medio Ambiente lsquoAgua Biodiversidad e Ingenieriacutearsquo Zaragoza 25-27 de octubre de 2006

Hulbert SM 1971 The nonconcept of species diversity A critique and alternative para- meters Ecology 52557-586

Matas RM 2008 Liacutenea de Alta Velocidad Madrid - Castilla-La Mancha - Comunidad Valenciana - Regioacuten

de Murcia CONAMA 9 Congreso Nacional del Medio Ambiente Cumbre del Desarrollo Sostenible Madrid 1-5 de diciembre de 2008

RAE 2001 Diccionario de la Lengua Espantildeola 22ordf edicioacuten Espasa Calpe Madrid

Tongway DJ J Cortina y FT Maestre 2004 Hetero-geneidad espacial y gestioacuten de medios semiaacuteridos Ecosistemas 132-19

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10Legislacioacuten

Carlos Iglesias Luis Balaguer Ignacio Mola y Valentiacuten Alfaya

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IacuteNDICE

CAPIacuteTULO 10 Legislacioacuten

Carlos Iglesias Luis Balaguer Ignacio Mola y Valentiacuten Alfaya

I INTRODUCCIOacuteN Y OBJETIVOS

En coherencia con el pragmaacutetico deseo general ex-presado en el resto del libro este capiacutetulo de Legis-lacioacuten se concibe con la idea de ofrecer una visioacuten comentada de normas relevantes cuyo contenido tiene influencia directa sobre el disentildeo de los tra-tamientos de restauracioacuten de infraestructuras de transporte su mantenimiento y el seguimiento de estas medidas correctoras confiando en que resul-ten de utilidad para los agentes que intervengan en las distintas fases de los procesos de planificacioacuten proyecto construccioacuten y explotacioacuten de las mismas si bien no es pretensioacuten de sus autores confeccionar un listado interminable sobre materia legal aplicable al aacutembito de las infraestructuras de transporte ni sobre su restauracioacuten o la de zonas afectadas por su ejecucioacuten y funcionamiento

Dicho enfoque responde al convencimiento de la escasa utilidad que hoy en diacutea tiene el formato tradicional de elaborar interminables listados de normas maacutes o menos relacionadas con la redac-cioacuten de proyectos no tanto por la inevitable ca-ducidad de muchas normas a corto y medio plazo como por las facilidades de acceso que ofrece In-ternet a numerosas paacuteginas web oficiales donde se ofrece dicha informacioacuten actualizada en tiempo real

En este capiacutetulo se pone de relieve la estrecha re-lacioacuten entre normas dispares y en ocasiones el conflicto que se genera entre distintas normas que

pueden determinar la toma de decisiones aunque a veces la falta de consideracioacuten de algunas de ellas compromete el eacutexito de las medidas correctoras como por ejemplo suele ocurrir cuando se ignoran las labores de conservacioacuten y mantenimiento que inevitablemente se realizan en algunas aacutereas restau-radas de las infraestructuras

En determinados aacutembitos profesionales la restau-racioacuten de los taludes y otras superficies alteradas se percibe como una tarea repetitiva cuyo disentildeo responde sistemaacuteticamente al mismo esquema con escasas diferencias seguacuten se trate de los taludes de terrapleacuten o desmonte lo cual dista mucho de la rea-lidad de la restauracioacuten ecoloacutegica de estas infraes-tructuras como se ha mencionado repetidamente en este libro Sin embargo cabe resaltar algunos obs-taacuteculos legales con los que se pueden encontrar los teacutecnicos a la hora de promover y defender algunas ideas novedosas en sus proyectos de restauracioacuten pese a que puedan basarse en los datos de expe-riencias previas o en la literatura cientiacutefica que em-pieza a abundar al respecto Es una responsabilidad de las Administraciones crear un marco favorable de actuacioacuten en el que se integren los distintos puntos de vista incentivando las decisiones motivadas y adecuadas a los fines establecidos en sus propias actuaciones y poliacuteticas

Antes de finalizar este apartado de introduccioacuten conviene recordar el artiacuteculo 45 de la Constitucioacuten

Espantildeola (en adelante CE) que preveacute la proteccioacuten del medio ambiente como labor de los poderes puacute-blicos velando por la utilizacioacuten racional de todos los recursos naturales con el fin de proteger y me-jorar la calidad de la vida y defender y restaurar el medio ambiente con el apoyo de la indispensable solidaridad colectiva Responsabilidades puacuteblicas ar-ticuladas en el punto 14819 de la CE que atribuye a las comunidades autoacutenomas la competencia de ges-tioacuten en materia de proteccioacuten del medio ambiente correspondiendo al Estado la competencia exclusiva para establecer la legislacioacuten baacutesica en dicha mate-ria (art 149123) Cabe destacar en el enunciado del citado artiacuteculo de la CE su acierto visionario al vincular la calidad de vida de los ciudadanos con la restauracioacuten del medio ambiente anticipaacutendose asiacute a la definicioacuten formal de los objetivos de la restau-racioacuten ecoloacutegica que actualmente se centran en la reposicioacuten de valores bienes y servicios a las pobla-ciones humanas

A continuacioacuten se agrupan las normas recopiladas con la filosofiacutea comentada en esta introduccioacuten para ello se han organizado seguacuten materias con la pretensioacuten de facilitar su consulta a los equipos re-dactores de proyectos Aunque en cada apartado se trata de respetar el orden jeraacuterquico de las normas quizaacutes parezca desordenado en alguacuten punto porque no en todas las materias existen normas a todos los niveles o bien no se han encontrado datos resentildea-bles en todas las normas que existen

II LEGISLACIOacuteN SECTORIAL CARRETERAS Y FERROCARRILES

1 Ideas baacutesicas

La CE atribuye al Estado la competencia exclusiva para establecer la legislacioacuten baacutesica entre otras ma-terias sobre ferrocarriles y transportes terrestres que transcurran por el territorio de maacutes de una comuni-dad autoacutenoma (art 149121) y ademaacutes la compe-tencia exclusiva en obras puacuteblicas de intereacutes general o cuya realizacioacuten afecte a maacutes de una comunidad autoacutenoma (art 149124) Teniendo en cuenta la or-ganizacioacuten del Estado y los procesos de descentra-lizacioacuten administrativa en materia de carreteras el marco legal se encuentra constituido por una Ley estatal de carreteras (Ley 251988 BOE nordm 182 de 30 de julio de 1988) un Reglamento de carreteras (RD 18121994 BOE nordm 228 de 23 de septiembre de 1994) que desarrolla la anterior junto a sus posterio-res modificaciones y diecisiete normas autonoacutemicas

con rango de ley en algunos casos desarrolladas por sus propios reglamentos y en otros complementa-das con decretos por los que se aprueban instruccio-nes teacutecnicas como por ejemplo las referentes a los firmes Aunque en el caso que nos ocupa resultaraacute de particular intereacutes rescatar maacutes adelante la Orden Ministerial de 21 de marzo de 1963 por la que se aprueba la Instruccioacuten de la Direccioacuten General de Carreteras 71 ndash IC sobre lsquoPlantaciones en las zonas de servidumbre de las carreterasrsquo auacuten en vigor pese al olvido al que se encuentra sometida quizaacutes por obsoleta y por resultar de escasa aplicabilidad a los proyectos de las modernas carreteras

Finalmente el artiacuteculo 40 del Reglamento Gene-ral de Carreteras (RD 18121994) establece que sin perjuicio de los reglamentos teacutecnicos de aacutem-bito general que sean de aplicacioacuten el ahora

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IacuteNDICE

denominado Ministerio de Fomento a propuesta de la Direccioacuten General de Carreteras aprobaraacute las normas e instrucciones teacutecnicas a las que de-ban sujetarse los trabajos y obras de construc-cioacuten de las carreteras estatales las cuales debe-raacuten revisarse perioacutedicamente para su actualizacioacuten permanente debieacutendose publicar estas normas e instrucciones en el Boletiacuten Oficial del Estado De este modo la Administracioacuten competente dota de la fuerza necesaria al compendio de normas e ins-trucciones de carreteras que perioacutedicamente se revisan y actualizan Siendo su observancia obli-gatoria por Ley de esta forma determinados cri-terios teacutecnicos prevalecen faacutecilmente sobre otras normas o recomendaciones opuestas o incompati-bles de menor rango o susceptibles de una inter-pretacioacuten maacutes flexible como suele ser frecuente en materia ambiental

2 El paisaje desde las infraestructuras de transporte el entorno en sentido amplio

El empleo de diferentes escalas de trabajo a la hora de considerar el entorno de las infraestructuras de transporte resulta determinante para comprender sus efectos sobre el medio En este sentido desde hace ya bastantes antildeos en la literatura cientiacutefica abundan los trabajos que promueven el enfoque sisteacutemico a diferentes escalas para comprender los posibles procesos afectados base de buena parte de los contenidos de los capiacutetulos anteriores de este libro

En sentido inverso simultaacuteneamente proliferan los trabajos de interpretacioacuten y acceso al paisaje desde las infraestructuras de transporte En este aacutembito ha adquirido notable relevancia la Ley 51996 de Carreteras de Cantabria (BOE nordm 51 de 28 de fe-brero de 1997) que en su artiacuteculo 26 preveacute que puedan ser declaradas como carreteras o tramos de especial proteccioacuten entre otros las carreteras o tramos parciales de importancia por su funcioacuten te-rritorial o debido a sus condiciones medioambien-tales Debiendo ser declaradas en cualquier caso como carreteras singulares de especial proteccioacuten ecoloacutegica y paisajiacutestica aquellas que atraviesen es-pacios naturales protegidos afecten a bienes de intereacutes cultural puedan alterar las condiciones de los paisajes naturales o culturales preexistentes o pongan en peligro los testimonios etnograacuteficos de la cultura material popular

En coherencia con ello en la Comunidad Autoacutenoma de Cantabria ademaacutes han promulgado el Decreto 612004 sobre carreteras de especial proteccioacuten por atravesar espacios naturales protegidos de Can-tabria (BOC nordm 121 de 24 de junio de 2004) donde se contempla que para la definicioacuten de las medidas de integracioacuten ambiental se deacute prioridad al empleo de la vegetacioacuten como elemento constructivo de manera aislada o en combinacioacuten con materiales inertes asiacute como al uso de materiales tradicionales de cada zona

Otro caso destacable es el de la Comunidad Au-toacutenoma de Andaluciacutea que cuenta con un cataacute-logo de 44 carreteras paisajiacutesticas que se ex-tienden a lo largo de 1666 km de recorrido y contempla que con el objeto de conservar o potenciar el caraacutecter paisajiacutestico de las carrete-ras destinadas a acoger funciones relacionadas con el acceso y disfrute del paisaje se planteen dos posibles estrategias a implementar en los proyectos de adecuacioacuten y mejora de estas in-fraestructuras

La primera de ellas se basa en la utilizacioacuten de disentildeos materiales y soluciones teacutecnicas que alu-dan a patrones o caracteriacutesticas formales reconoci-bles en el entorno viario mientras que la segunda pasa por mejorar el diaacutelogo entre la carretera y determinados elementos singulares situados en sus maacutergenes construcciones tradicionales arbo-lado en las maacutergenes muros de piedra etc (CEPT 2009)

En otro aacutembito geograacutefico con base en la Ley 21983 de alta montantildea (DOGC n 312 del 16 de marzo de 1983) de la Generalidad de Cataluntildea se han elaborado las recomendaciones teacutecnicas para el disentildeo sostenible de carreteras de montantildea con el objeto de que la dotacioacuten de infraestruc-turas en este medio no resulte en detrimento de los valores naturales del entorno ni del potencial turiacutestico de la propia infraestructura En ellas se efectuacutea una serie de recomendaciones sobre los elementos que conforman las carreteras a menu-do por debajo de los umbrales que fija la Norma 31-IC de trazado tratando de no renunciar por ello a la seguridad

Por uacuteltimo aunque no constituyen un texto legal la Junta de Andaluciacutea ha elaborado a traveacutes de la empresa puacuteblica GIASA dependiente de la Con-sejeriacutea de Obras Puacuteblicas unas recomendaciones teacutecnicas para el disentildeo y ejecucioacuten de sistemas viarios en medios sensibles con el objeto de ser considerado por proyectistas y teacutecnicos durante la fase de obras de estas infraestructuras (JAOPGIASA 2006)

3 El entorno inmediato de las infraestructuras de transporte dominio puacuteblico y zonas de servidumbre

Tanto la legislacioacuten baacutesica de carreteras como la del sector ferroviario establecen en el aacutembito de influencia de dichas infraestructuras la existencia de unas zonas de dominio puacuteblico de servidumbre y de afeccioacuten En estas zonas de proteccioacuten quedan condicionados numerosos usos en funcioacuten de su compatibilidad con los elementos funcionales de las infraestructuras por ejemplo las plantaciones o talas de aacuterboles estando sometidos en algunos casos a la preceptiva autorizacioacuten de la Administra-cioacuten competente Por razoacuten del reacutegimen juriacutedico al que estaacuten sujetos los bienes y derechos que inte-gran el patrimonio de las Administraciones puacuteblicas pueden ser de dominio puacuteblico o demaniales y de dominio privado o patrimoniales de acuerdo con la Ley 332003 del Patrimonio de las Administra-ciones Puacuteblicas (BOE nordm 264 de 4 de noviembre de 2003) Los bienes y derechos de dominio puacuteblico son los que siendo de titularidad puacuteblica se en-cuentren afectados al uso general o al servicio puacute-blico asiacute como aquellos a los que una ley otorgue expresamente el caraacutecter de demaniales

Cuadro 1 Entre otros principios la gestioacuten y administracioacuten de los bienes y derechos patrimoniales por las Administraciones puacuteblicas deben ajustarse a los siguientes

a) Eficiencia y economiacutea en su gestioacuten

b) Eficacia y rentabilidad en su explotacioacuten

c) Transparencia y objetividad en su explotacioacuten

d) Identificacioacuten y control a traveacutes de inventarios o registros adecuados

e) Colaboracioacuten y coordinacioacuten entre las diferen-tes Administraciones puacuteblicas con el fin de optimizar la utilizacioacuten y el rendimiento de sus bienes

Figura 1 La autoviacutea A-4 a su paso por el paisaje singular del desfilade-

ro de Despentildeaperros en la provincia de Jaeacuten (Foto Carlos Iglesias)

Figura 2 El mantenimiento de vegetacioacuten arbustiva en el dominio puacuteblico permite conectar distintos rodales y pasos de fauna en la imagen un tramo de la autoviacutea A-52 (Foto Carlos Iglesias)

La defensa y proteccioacuten del patrimonio de las Adminis-traciones puacuteblicas es una obligacioacuten inherente a ellas siendo la conservacioacuten de los bienes y derechos de dominio puacuteblico competencia del Ministerio u organis-mo puacuteblico al que se encuentren afectados o adscritos o al que corresponda su administracioacuten La Ley preveacute que en el caso de que sobre un bien se impongan una o varias afectaciones concurrentes la participacioacuten de los diversos departamentos u organismos en la con-servacioacuten se podraacute determinar mediante acuerdos o protocolos de actuacioacuten entre ellos (en su defecto la forma de participacioacuten de cada uno la fijariacutea el ministro de Hacienda) Y por uacuteltimo otro aspecto de relevancia a incluir en esta introduccioacuten como mucha gente bien conoce seguacuten el reacutegimen de disponibilidad los bienes y derechos de dominio puacuteblico son inalienables im-prescriptibles e inembargables

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IacuteNDICE

Tabla 1 El dominio puacuteblico viario y las limitaciones a la propiedad en carreteras y ferrocarriles

INFRAESTRUCTURA Y CONSIDERACIONES

DOMINIO PUacuteBLICO

ZONA DE SERVIDUMBRE

LIacuteMITE DE EDIFICACIOacuteN

ZONA DE AFECCIOacuteNPROTECCIOacuteN

Autopistas autoviacuteas y viacuteas raacutepidas

8 metros 25 metros 50 metros 100 metros

Carreteras convencionales

3 metros 8 metros 25 metros 50 metros

Ferrocarriles 8 metros ---------- 50 metros 70 metros

ConsideracionesProhibido plantaciones de arbolado

Autorizable plantaciones de arbolado

----------Autorizables plantaciones de arbolado

Tabla 2 Particularidades sobre el dominio puacuteblico viario y las limitaciones a la propiedad en carreteras

DOMINIO PUacuteBLICO

ASTURIAS Se permiten cultivos y zonas ajardinadas de talla inferior a 05 metros

EXTREMADURA Anchura de 2 m en las carreteras denominadas vecinales

NAVARRA No son autorizables las plantaciones de arbolado

GALICIA No podraacute exceder 15 m de ancho en autopistas autoviacuteas corredores y viacuteas raacutepidas y 10 m de ancho en el resto de las carreteras

ZONA DE SERVIDUMBRE

ISLAS BALEARES Denominada zona de proteccioacuten (18 m de anchura en carreteras de dos carriles de la red primaria y secundaria y de 8 m las de la red local o rural)

CANTABRIADenominada zona de proteccioacuten (18 m en carreteras primarias 14 m en carreteras secundarias y 10 m en las locales)

GALICIA Y NAVARRA Mide 17 m en autopistas autoviacuteas corredores y viacuteas raacutepidas y 2 m en el resto de las carreteras de Galicia desde el dominio puacuteblico y 5 m en el resto de las de Navarra

CATALUNtildeA Se permiten cerramientos arbustivos de talla inferior a 120 m

REGIOacuteN DE MURCIA Se considera 30 m de ancho para las carreteras de segundo y tercer nivel

LIacuteMITE DE EDIFICACIOacuteN

ANDALUCIacuteA Se extiende hasta los 100 m

CASTILLA Y LEOacuteN Posee una anchura de 18 m en carreteras que no sean autopistas autoviacuteas ni viacuteas raacutepidas

LA RIOJA Posee una anchura de 18 m en carreteras que no sean autopistas autoviacuteas ni viacuteas raacutepidas

NAVARRA Posee una anchura de 18 m en carreteras locales

REGIOacuteN DE MURCIA Posee una anchura de 18 m en carreteras de tercer nivel

GALICIA Mide 30 m de autopistas autoviacuteas y viacuteas raacutepidas 12 m en carreteras de la red primaria baacutesica 195 m las de la red primaria complementaria y 7 m en el resto

VIZCAYA Mide 18 m en la red comarcal y complementaria de Vizcaya y 12 m en la red local

ZONA DE AFECCIOacuteN

CASTILLA-LA MANCHA

Denominada zona de proteccioacuten mide 30 m de anchura en carreteras que no sean autopistas autoviacuteas ni viacuteas raacutepidas

ANDALUCIacuteA CASTILLA Y LEOacuteN GALICIA Y VIZCAYA

Mide 25 m en el resto de carreteras

GUIPUacuteZCOA Denominada zona de proteccioacuten mide 30 m de anchura en carreteras que no sean autopistas autoviacuteas ni viacuteas raacutepidas y se prohiacutebe la plantacioacuten y tala de aacuterboles y arbustos Mide 10 m en el caso de caminos

NOTA en la Comunidad de Madrid se establecen solo dos zonas el dominio puacuteblico y la zona de proteccioacuten que posee un ancho de 50 metros en autopistas y autoviacuteas 25 m en las carreteras integradas en la red principal y 15 m en el resto de las redes de la Comunidad de Madrid medidos desde la arista exterior de explanacioacuten

Figura 3 Caracteriacutesticas baacutesicas del dominio puacuteblico viario y las limitaciones a la propiedad en carreteras y ferrocarriles (modificado de Igle-sias Merchaacuten y Herrera Calvo 2008)

DOMINIO PUacuteBLICO anchura variable (8 m tronco de autoviacuteas autopistas viacuteas raacutepidas y FFCC 3 m ctra convencional caminos servicio etc)

DOMINIO PUacuteBLICO

INTERIOR DE LA INFRAESTRUCTURA

ZONA DE AFECCIOacuteN EN CARRETERAS

100 m (50 m ctra convencional)

ZONA DE PROTECCIOacuteN EN FFCC

70 m

LIacuteMITE DE EDIFICACIOacuteN EN CARRETERAS Y FFCC

50 m (25 m ctra convencional)

ZONA DE SERVIDUMBRE EN CARRETERAS

25 m (8 m ctra convencional)

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IacuteNDICE

Ademaacutes de las anteriores referencias al dominio puacute-blico y las limitaciones a la propiedad merece la pena resentildear algunas particularidades relacionadas con el manejo y la gestioacuten de estas zonas y la res-tauracioacuten de las infraestructuras de transporte que se incluyen en algunas normas autonoacutemicas El artiacute-culo 6 de la Ley 82001 de Carreteras de Andaluciacutea (BOJA nordm 85 de 26-7-2001) establece expliacutecitamen-te que la zona de dominio puacuteblico adyacente a las carreteras deberaacute quedar debidamente amojonada e integrada en su medio natural mediante la im-plantacioacuten en ella de las correspondientes actua-ciones de restauracioacuten paisajiacutestica Su artiacuteculo 31 iacutentegramente dedicado al proyecto de restauracioacuten paisajiacutestica establece que se realizaraacute la revegeta-cioacuten del dominio puacuteblico viario y de su entorno sin que necesariamente tenga que estar vinculada su redaccioacuten y ejecucioacuten a las obras de carreteras ni a la contratacioacuten del proyecto de construccioacuten idea no solo aplicada al caso de Andaluciacutea

La segregacioacuten de un proyecto de restauracioacuten respecto del proyecto de construccioacuten de una in-fraestructura es objeto de debate desde hace mu-cho tiempo sin que se conozcan los resultados ni valoraciones de las experiencias realizadas en ocasiones promovidas en aacutembitos geograacuteficos dis-tintos de Andaluciacutea En todo caso es una cuestioacuten contradictoria con la esencia de la EIA que preci-samente pretende que los proyectos de restaura-cioacuten de las actividades evaluadas formen parte de los proyectos de construccioacuten si bien la Ley an-daluza emplea dos teacuterminos integracioacuten ambien-tal y restauracioacuten paisajiacutestica con la intencioacuten de establecer una diferencia entre la ejecucioacuten de las medidas preventivas y correctoras establecidas en la declaracioacuten ndasho informendash de impacto ambien-tal (integracioacuten ambiental) de aquellas otras adi-cionales que persigan la revegetacioacuten del dominio puacuteblico viario y del entorno afectado (restauracioacuten paisajiacutestica) Para ello la legislacioacuten andaluza pre-veacute que la Administracioacuten pueda utilizar la zona de servidumbre para cuantas actuaciones requiera el intereacutes general y el mejor servicio del dominio puacuteblico viario incluida la integracioacuten paisajiacutestica de la carretera

En este sentido la Ley de Carreteras de la Comuni-dad de Madrid (Ley 31991 BOCM de 21 de marzo de 1991) incluye una referencia al medio ambiente en la fase de su explotacioacuten pues en su artiacuteculo 25 determina que a la explotacioacuten de las carreteras comprende entre otras labores las de restauracioacuten y proteccioacuten medioambientales necesarias y estable-cidas en el ordenamiento juriacutedico vigente

Respecto a la posibilidad de autorizarse la plantacioacuten o tala de aacuterboles en zonas de servidumbre y afeccioacuten de las carreteras destaca la mencioacuten adicional a los arbustos en el Decreto Foral Normativo 12006 de Carreteras y Caminos de Gipuzkoa (BOG nordm 117 de 21 de junio de 2006) recogido en la tabla 2

Tambieacuten se puede destacar como una referencia a los efectos sobre el medio ambiente de las carrete-ras durante su fase de explotacioacuten el artiacuteculo 28 de la Ley 22008 de Carreteras de la Regioacuten de Murcia (BORM nordm 111 de 14 de mayo de 2008) que faculta a la consejeriacutea competente en materia de carreteras para ordenar el traacutefico (aunque solo el traacutefico pesa-do) por motivos ambientales entre otros

Figura 4 Algunas carreteras se caracterizan por un denso traacutefico de vehiacuteculos pesados La Legislacioacuten de la Regioacuten de Murcia permite su ordenacioacuten en funcioacuten de criterios de caraacutecter ambiental Imagen de la carretera N-232 en La Rioja (Foto Carlos Iglesias)

Aunque la norma que se muestra particularmente in-fluyente sobre los usos del suelo en su entorno es la Ley 51990 de Carreteras de la Comunidad Autoacuteno-ma de las Islas Baleares (BOE nordm 184 de 2 de agosto de 1990) puesto que preveacute que los planes de carre-teras o los urbaniacutesticos que incluyan carreteras fijen en su caso una zona de reserva para ampliacioacuten o mejora de las carreteras cuya anchura miacutenima seraacute

a) 100 metros para viacuteas de cuatro o maacutes carriles

b) 50 metros para viacuteas de dos carriles de las redes primaria y secundaria

c) 25 metros para viacuteas de dos carriles de las redes local o rural

En la zona de reserva se prohibiraacute la ejecucioacuten de cualquier tipo de obra o instalacioacuten que no sean las de mera conservacioacuten de las existentes y tam-bieacuten cualquier otra clase de actividades que puedan

elevar el valor del suelo excepto los de cultivos agriacute-colas Ademaacutes las anchuras descritas se incremen-taraacuten en un 50 cuando se trate de carreteras de nuevo trazado

Sin embargo en Baleares se contempla que las la-bores agriacutecolas no tengan ninguna restriccioacuten fuera de la zona de dominio puacuteblico excepto en el caso de que con ellas pueda verse comprometido el traacute-fico en concreto Solo en este caso seraacute preceptiva la autorizacioacuten del organismo titular de la carretera para la plantacioacuten o tala de arbolado y la recogida y evacuacioacuten de los productos cuando se realicen a una distancia menor de 3 metros de la arista de la explanacioacuten y esta pueda verse afectada

4 Plantaciones en las zonas de servidumbre de las carreteras Instruccioacuten 71-IC

En la introduccioacuten de este mismo capiacutetulo se ha in-cluido una breve referencia al marco general legal en materia de infraestructuras de transporte par-ticularmente en el caso de las carreteras Conviene recordar que la legislacioacuten baacutesica del Estado Ley y Reglamento de Carreteras tienen continuidad en diecisiete normas autonoacutemicas con rango de ley En algunos casos desarrolladas por sus propios regla-mentos y ademaacutes complementadas ambos con de-cretos y oacuterdenes por las que se aprueban por ejem-plo instrucciones teacutecnicas de obligado cumplimien-to en distintas fases de la planificacioacuten proyecto y explotacioacuten de las infraestructuras de transporte En este sentido resulta de particular intereacutes en este

La instruccioacuten 71-IC establece una serie de normas y recomendaciones a tener en cuenta en las plantaciones que se efectuacuteen en la zona de servidumbre de las carre-teras a las que atribuye funciones ligadas a una concep-cioacuten de los trazados y de la conduccioacuten propias de hace cuatro deacutecadas como orientar el traacutefico proporcionar zonas de sombra y descanso a los viajeros y de orden esteacutetico como es la integracioacuten de las carreteras en el paisaje que atraviesa la valoracioacuten de determinados puntos de vista o la ocultacioacuten de aquellos que no resul-taran agradables Sin embargo tambieacuten atribuye a las plantaciones a lo largo de las carreteras la posibilidad de cumplir simultaacuteneamente otras funciones como conte-ner taludes y evitar la erosioacuten Como aspectos singulares de la norma destaca la recomendacioacuten de no plantar aacuterboles cuando la carretera atraviese o esteacute proacutexima a bosques o plantaciones de frutales y en todo caso que las plantaciones permitan la visioacuten del paisaje

Figura 5 Algunas declara-ciones de impacto ambien-tal establecen la condicioacuten de proyectar plantaciones arboacutereas para ocultar ele-mentos constructivos como pilares pantallas acuacutesticas etc pese a situarse en una zona donde la legislacioacuten vigente prohiacutebe este tipo de restauraciones (Foto Carlos Iglesias)

libro recordar la existencia de la Orden Ministerial de 21 de marzo de 1963 por la que se aprueba la Instruccioacuten de la Direccioacuten General de Carreteras 71-IC sobre lsquoPlantaciones en las zonas de servidumbre de las carreterasrsquo

Esta norma auacuten permanece en vigor pese al ol-vido al que se encuentra sometida por lo que convendriacutea recordar que el Reglamento General de Carreteras (RD 18121994) contempla la nece-sidad de revisar perioacutedicamente para su actua-lizacioacuten permanente las normas e instrucciones teacutecnicas a las que deban sujetarse los trabajos y obras de construccioacuten de las carreteras esta-tales

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IacuteNDICE

Figura 6 Primera paacutegina de la instruccioacuten de carreteras 71-IC publicada en el BOE de 8 de abril de 1963 y actualmente vigente Sus carac-teriacutesticas histoacutericas compensan la pobreza graacutefica de la figura pero no la escasa aplicabilidad de la norma

Aunque es una norma desactualizada difiacutecilmen-te aplicable a las modernas infraestructuras de transporte estaacute salpicada de frases de completa vigencia como la importancia que otorga a la ar-monizacioacuten de la infraestructura con el paisaje particularmente en aquellas zonas caracterizadas por la ausencia de vegetacioacuten Tambieacuten es cierto que resalta la importancia de una adecuada selec-cioacuten de especies tanto en lo que a su funcioacuten se refiere como a su conservacioacuten recomendaacutendose la adopcioacuten de las especies caracteriacutesticas de la regioacuten

La existencia de una norma de casi 40 antildeos de anti-guumledad dedicada a establecer los principios baacutesicos de la integracioacuten ambiental de las infraestructuras de transporte en Espantildea en un hecho singular que revela la intencioacuten renovadora y probablemente el empuje de un grupo de teacutecnicos comprometidos en su esfuerzo por comprender la relacioacuten de las infraestructuras de transporte con su entorno casi 25 antildeos antes de la transposicioacuten al ordenamien-to juriacutedico espantildeol de las primeras Directivas euro-peas en materia de evaluacioacuten ambiental En todo caso teniendo en cuenta los ritmos del progreso el periacuteodo de tiempo transcurrido y la inevitable caducidad de las normas cuando dejan de ajustarse a la realidad cambiante convendriacutea recordar a las Administraciones sus responsabilidades en cuanto a

la necesaria revisioacuten de las normas para su adecua-cioacuten al progreso teacutecnico y cientiacutefico

5 Instrucciones y Recomendaciones en los proyectos de alta velocidad

El Administrador de Infraestructuras Ferroviarias (ADIF) es una entidad puacuteblica empresarial depen-diente del Ministerio de Fomento que entre sus en-comiendas tiene la redaccioacuten de proyectos cons-truccioacuten y puesta en servicio entre otras de las liacuteneas de alta velocidad Como parte integrante del Sistema de Gestioacuten de la Calidad adoptado por el ADIF se encuentran las Instrucciones y Recomen-daciones para la redaccioacuten de los proyectos de la plataforma de liacuteneas de alta velocidad ferroviaria conocidas como IGP cuya uacuteltima revisioacuten se ha lle-vado a cabo durante el antildeo 2010 para actualizar las hasta ahora denominadas IGP-2008 Con ellas se pretende favorecer la homogeneidad en la interpre-tacioacuten a los criterios aplicados por los proyectistas asiacute como facilitar la actualizacioacuten ordenacioacuten y ar-chivo sistemaacutetico de las instrucciones que con este fin se distribuyen y actualizan por el propio ADIF perioacutedicamente Maacutes recientemente la DG de Infra-estructuras Ferroviarias del Ministerio de Fomento estaacute desarrollando a semejanza de las citadas IGP un manual para la redaccioacuten de proyectos si bien

en este capiacutetulo se detallan algunos aspectos de las IGP de ADIF maacutes utilizadas hasta la fecha

Los redactores de proyectos quedan obligados a consultar estas Instrucciones y Recomendaciones y en caso necesario soliciten del ADIF las aclaraciones oportunas no tanto en la interpretacioacuten y aplicacioacuten de la normativa oficialmente vigente sino por los posibles conflictos con el texto de algunas declara-ciones de impacto ambiental

Cuadro 2 El capiacutetulo 6 de las IGP estaacute reservado al medio ambiente y consta de los siguientes documentos a considerar durante la redaccioacuten de un proyecto de construccioacuten

IGP-61 Guiacutea de prescripciones ambientales para los proyectos de construccioacuten

IGP-62 Programa tipo de vigilancia ambiental

IGP-63 Criterios para la valoracioacuten del coste ambiental

IGP-64 Estudio para la prevencioacuten de ruidos y vibraciones

Estas Instrucciones contienen una relacioacuten de criterios teacutecnicos que sirven de directrices para la coordinacioacuten en el disentildeo de las medidas de proteccioacuten y correc-cioacuten ambiental de los proyectos de las liacuteneas de alta velocidad estructurados seguacuten los principales facto-res ambientales que se contemplan habitualmente en las DIA del Ministerio de Medio Ambiente y ahora tambieacuten de Medio Rural y Marino Las directrices de coordinacioacuten constituyen un intento ambicioso por servir de marco general de homogeneizacioacuten en la redaccioacuten de proyectos aunque sin descender a deta-lles de disentildeo teacutecnico que entran en la competencia de los respectivos proyectistas Por ejemplo en el apartado dedicado a la recuperacioacuten y utilizacioacuten de tierra vegetal queda definida esta como todo aquel material procedente de excavacioacuten cuya composicioacuten fiacutesico-quiacutemica y granulomeacutetrica permita el estableci-miento de una cobertura herbaacutecea permanente (al menos inicialmente mediante las teacutecnicas habituales de hidrosiembra) y sea susceptible de recolonizacioacuten natural Se preveacute su retirada selectiva mantenimiento y conservacioacuten Sin embargo se sigue proponiendo la reextensioacuten de un espesor promedio de 30 cm de tierra vegetal sobre las superficies a restaurar cues-tioacuten discutida desde hace tiempo y sobre la que se aclaran bastantes ideas preconcebidas al respecto en el capiacutetulo 4 de este libro

Figura 7 Las directrices de coordinacioacuten constituyen un intento ambicioso por servir de marco general de homogeneizacioacuten en la redaccioacuten de proyectos de liacuteneas de alta velocidad Imagen de un tren saliendo de un falso tuacutenel de la liacutenea Madrid-Valladolid junto al monte de El Pardo (Foto Carlos Iglesias)

En las IGP ocupan un espacio destacado todas las medidas a proyectar en relacioacuten con la proteccioacuten de la fauna en especial se incluyen referencias expliacutecitas para incorporar al proyecto los criterios de los docu-mentos para la reduccioacuten de la fragmentacioacuten de haacute-bitats del Ministerio de Medio Ambiente y Medio Rural y Marino (MMA 2006 MARM 2008 y MARM 2010)

En cuanto a la restauracioacuten vegetal se refiere se contempla que en cada caso se tendraacute que ser coherente tanto desde el punto de vista ecoloacutegico como paisajiacutestico con el territorio atravesado pre-tendiendo que se trate el terreno alterado y espe-cialmente los taludes con el aspecto y composicioacuten vegetal predominante lo maacutes parecidos posible a los existentes antes de las obras Los tratamientos muy intensivos maacutes propios de jardineriacutea se reservan para zonas urbanas o periurbanas el resto de los tratamientos vegetales deberaacute integrarse adecuada-mente en el medio atravesado

A la restauracioacuten vegetal se le otorgan los objetivos ecoloacutegicos paisajiacutesticos (integracioacuten y ocultacioacuten de vistas poco esteacuteticas) y de control de la erosioacuten de las superficies desnudas generadas por las obras Ademaacutes se recomienda la realizacioacuten de estudios en detalle de la vegetacioacuten a lo largo de la traza para lo-calizar la flora de intereacutes para su proteccioacuten y detectar las especies del lugar susceptibles de ser utilizadas en la revegetacioacuten Respecto a la seleccioacuten de espe-cies se incluye una serie de factores a considerar si bien auacuten se permanece lejos de reflejar la necesidad y el modo en que se debe acopiar este material de la propia zona con la antelacioacuten suficiente

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IacuteNDICE

Figura 8 Ejemplares de Erodium celtibericum en un vivero de obra en alta montantildea (Fuente Castellana Ribas y Riaza Lujaacuten 2010) (Foto FOLIA Consultores)

Aunque se proponen diversos modelos de restaura-cioacuten tambieacuten se recuerda que las plantaciones ar-boacutereas propuestas en proyecto deberaacuten adecuarse al RD 23872004 es decir al Reglamento del Sector Fe-rroviario (BOE nordm 315 de 31 de diciembre de 2004) Esto significa que se prohiacutebe la plantacioacuten de arbo-lado en zona de dominio puacuteblico de acuerdo con el artiacuteculo 30 apartado 2a si bien podriacutean autorizarse

en la zona de proteccioacuten aunque esta excede las po-sibilidades del proyecto y del propio administrador de la infraestructura a los efectos de su restauracioacuten ambiental Las IGP tambieacuten establecen la obligacioacuten de hacer un inventario del arbolado autoacutectono de intereacutes afectado debieacutendose atender a su tamantildeo estado y posibilidades de arraigo tras su trasplan-te consideracioacuten que no deberiacutea interpretarse como la obligacioacuten de proponer en proyecto el trasplante indiscriminado en nuacutemero y especies de cualquier ejemplar afectado por la construccioacuten de estas infra-estructuras

En su apartado 282 las IGP ofrecen una serie de criterios para el mantenimiento de la vegetacioacuten im-plantada en zonas restauradas donde se sugieren incluso las labores de riego abonados escardas binas y podas recordando la importancia de que todos estos trabajos tengan su reflejo apropiado en el correspondiente capiacutetulo del presupuesto del proyecto En todo caso la confeccioacuten de unas ins-trucciones actualizadas perioacutedicamente permite la incorporacioacuten de criterios adecuados a la realidad de los proyectos de las liacuteneas de alta velocidad que ademaacutes se pueden extrapolar a otras infraestructu-ras de transporte

III TEMAS AMBIENTALES

1 Evaluacioacuten ambiental

La Directiva comunitaria 85337CEE (DO L 17540 de 5 de julio de 1985) considera entre otros aspec-tos que los efectos de un proyecto sobre el medio ambiente deben evaluarse para proteger la salud humana contribuir mediante un mejor entorno a la calidad de vida velar por el mantenimiento de la diversidad de especies y para conservar la capacidad de reproduccioacuten del sistema como recurso funda-mental de la vida La incorporacioacuten en Espantildea de esta Directiva 85337CEE al Derecho interno estatal se efectuoacute mediante el RDL 13021986 (BOE nordm 155 de 30 de junio de 1986) que experimentoacute sucesivas modificaciones y el Reglamento que lo desarrolla el RD 113188 (BOE nordm 239 de 5 de octubre de 1988) Con posterioridad el RDL 12008 (BOE nordm 23 de 26 de enero de 2008) por el que se aproboacute el texto re-fundido de Ley de evaluacioacuten de impacto ambiental (EIA) de proyectos derogaba el RDL 13021986 y sus modificaciones y finalmente el RDL 12008 ha sido a su vez modificado por la reciente Ley 62010 (BOE nordm 73 de 25 de marzo de 2010) Simultaacuteneamente

la Directiva 85337CEE ha sido modificada por las Directivas 9711CE (DO L 73 de 14 de marzo de 1997) y 200335CE (DO L 56 de 25 de junio de 2003)

En la actualidad praacutecticamente la totalidad de los proyectos de infraestructuras de transporte puacutebli-cos y privados que correspondan a autopistas y autoviacuteas viacuteas raacutepidas y carreteras convencionales de nuevo trazado modificacioacuten del trazado o du-plicaciones de calzada de otras existentes en una longitud continuada de maacutes de 10 km y las liacuteneas de ferrocarril para traacutefico de largo recorrido deben someterse a EIA en la forma prevista en la Ley mien-tras que la obligatoriedad de someter a EIA el resto de carreteras y liacuteneas ferroviarias que quedan fuera del aacutembito competencial del Estado y no reuacutenan las anteriores caracteriacutesticas se determina en las corres-pondientes normativas autonoacutemicas

De modo general el proyecto para el tratamiento de los espacios afectados por las obras se articu-la en torno a los potenciales impactos ambientales

Desde los Reales Decretos 13021986 y 11311988 se establece que las EIA deben proponer las actuacio-nes necesarias para evitar reducir o compensar los efectos ambientales negativos significativos Estas acciones reciben el nombre de medidas preventivas (o protectoras) correctoras y compensatorias res-pectivamente La legislacioacuten baacutesica de EIA sumada a sus homoacutelogas autonoacutemicas extiende el dominio de aplicacioacuten de estas definiciones al aacutembito de las infraestructuras lineales que desde el punto de vis-ta de la ecologiacutea de la restauracioacuten en el antildeo 1998 se definiacutea como un gigante dormido por Forman y Alexander gigante por la extensioacuten de superficie afectada y la trascendencia de la adopcioacuten de crite-rios ecoloacutegicos y dormido por la exigua repercusioacuten de sus planteamientos aseveraciones difiacuteciles de mantener en la actualidad

2 Responsabilidad ambiental

El reciente reacutegimen europeo de responsabilidad am-biental uno de los cambios maacutes relevantes del de-recho ambiental europeo en los uacuteltimos antildeos pue-de tener implicaciones muy relevantes en materia de restauracioacuten ecoloacutegica Aunque la obligacioacuten de restaurar el medio natural afectado por un dantildeo ya estaba presente en la legislacioacuten ambiental su dis-persioacuten por todo el reacutegimen sectorial haciacutea difiacutecil su efectiva puesta en praacutectica Con el nuevo reacutegimen transpuesto a nuestro ordenamiento juriacutedico por me-dio de la Ley 262007 (BOE nordm 255 del 24 octubre 2007) y el RD 20902008 (BOE nordm 308 del 23 de diciembre de 2008) un operador que ha causado un dantildeo significativo tiene la obligacioacuten de reparar este dantildeo y restaurar el medio afectado con una respon-sabilidad que en teacuterminos econoacutemicos es ilimitada

El otro aspecto relevante consiste en que tal repara-cioacuten no puede hacerse de cualquier modo sino que debe asegurar el retorno de los sistemas naturales hasta lo que se define en el texto normativo como lsquoestado baacutesicorsquo esto es lsquoaquel en el que de no ha-berse producido el dantildeo medioambiental se habriacutean hallado los recursos naturales y los servicios en el momento en que sufrieron el dantildeorsquo Desde nues-tro punto de vista esta definicioacuten juriacutedica estaacute muy proacutexima al concepto de lsquorestauracioacuten ecoloacutegicarsquo y abre el reto de la restauracioacuten de los procesos eco-loacutegicos como leit motiv de estas actuaciones

En los uacuteltimos cuatro antildeos se declararon a las com-pantildeiacuteas de seguros casi dos centenares de sinies-tros que implicaban un dantildeo ambiental relevante Una parte importante de ellos requirioacute medidas de

restauracioacuten del lsquomedio naturalrsquo Una vez que el nue-vo reacutegimen ha entrado en vigor es razonable pensar que en los proacuteximos antildeos se mantengan o incremen-ten los procedimientos administrativos para exigir la obligacioacuten de restaurar y que esta exigencia legal se convierta en una palanca que extienda la restaura-cioacuten con criterios ecoloacutegicos como alternativa viable a los enfoques maacutes tradicionales

3 Biodiversidad

Desde el punto de vista de la planificacioacuten de infra-estructuras resulta obligatorio incluir una referencia al Plan Estrateacutegico de Infraestructuras y Transporte 2005-2020 (PEIT) que define las poliacuteticas que de-ben orientar los proyectos y las grandes liacuteneas de actuacioacuten Este Plan va acompantildeado de un estudio acerca de los efectos conjuntos que ocasionariacutea el PEIT sobre espacios naturales protegidos haacutebitats de intereacutes comunitario y especies fauniacutesticas de inte-reacutes de conformidad con la Directiva 9243 (DO L 206 de 2271992) conocida como Directiva Haacutebitats y la Directiva 79409 (DO L 103 de 2541979) popu-larmente denominada Directiva Aves

Aunque la escala de la planificacioacuten difiere nota-blemente de la que requiere el disentildeo de medidas correctoras al nivel de detalle de un proyecto de construccioacuten no debe obviarse el desarrollo de planes y programas que en ocasiones han adop-tado un enfoque ambiental Este cambio de escala ha sido promovido por la Directiva Haacutebitats la cual insta en su artiacuteculo 10 a fomentar la co-nexioacuten y coherencia ecoloacutegica de la Red Natura 2000 Frente a las medidas que con frecuencia se limitan a la actuacioacuten en franjas laterales es-tos planes y programas se interesan por el efec-to fragmentador de las infraestructuras y por su afeccioacuten a corredores ecoloacutegicos que manteniacutean la conexioacuten entre espacios naturales En el caso del PEIT en el que se basa el actual Plan Extraordi-nario de Infraestructuras (PEI) se valoroacute positiva-mente que no solo evaluara la afeccioacuten directa y ocupacioacuten del territorio sino tambieacuten la fragmen-tacioacuten de haacutebitats utilizando como indicadores el nuacutemero de unidades de vegetacioacuten producidas por divisioacuten de los mismos la superficie media de las teselas resultantes y su coeficiente de forma (relacioacuten periacutemetroaacuterea) Dicho estudio identifi-caba posibles puntos de conflicto que deberiacutean haber servido para orientar las fases siguientes de planificacioacuten y proyecto de las infraestructu-ras Al mismo nivel jeraacuterquico se situaraacute en bre-ve el Plan Estrateacutegico del Patrimonio Natural y

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En los taludes de carretera no solo prosperan especies frecuentes yo de amplia distribucioacuten En la imagen aparece un lirio boca de serpiente (Iris xyphium) y a su derecha un fragmento de la inflorescencia de una arzolla (Thapsia villo-sa) La fotografiacutea estaacute tomada en la parte supe-rior de un desmonte de la carretera M-604 de Madrid En los documentos de trabajo para la actualizacioacuten de Cataacutelogo Regional de Especies Amenazadas de la Flora Silvestre de la Comuni-dad de Madrid se propone su proteccioacuten como especie lsquosensible a la alteracioacuten de su haacutebitatrsquo (Blanco et al 1999) ya que se trata de una es-pecie escasa y de distribucioacuten puntual en este aacutembito territorial Autor Ignacio Mola

Blanco de Castro E (Coor) 1999 Revisioacuten del Cataacutelogo Regional de Especies Amenazadas de la Flora Silvestre de la Comunidad de Madrid Informe ineacutedito incluido en el Plan Forestal de la Comunidad de Madrid

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la Biodiversidad que ademaacutes de ser ob jeto de evaluacioacuten ambiental seguacuten lo dispuesto en la Ley 92006 (BOE nordm 102 del 29 de abril de 2006) sobre evaluacioacuten de los efectos de determinados planes y programas en el medio ambiente se ha sometido a consultas e informacioacuten puacuteblica de acuerdo con el procedimiento de elaboracioacuten del Plan Estrateacutegico que la Ley 422007 (BOE nordm 299 de 14 diciembre 2007) del Patrimonio Natural y de la Biodiversidad regula en su segundo capiacute-tulo El Plan Estrateacutegico del Patrimonio Natural y la Biodiversidad estaacute llamado a convertirse en el principal instrumento para la planificacioacuten de la accioacuten de la Administracioacuten General del Esta-do en la materia y tiene por objeto promover la conservacioacuten el uso sostenible y en su caso la restauracioacuten del patrimonio los recursos natu-rales terrestres y marinos y de la biodiversidad y geodiversidad Entre los principios que inspi-ran el Plan Estrateacutegico resulta obligado mencio-nar la necesaria integracioacuten sectorial es decir la incorporacioacuten de los objetivos y metas para la biodiversidad como parte esencial de todas las poliacuteticas sectoriales nacionales autonoacutemicas y lo-cales en particular aquellas que rigen la gestioacuten del territorio y los recursos naturales entre las que indudablemente destacan las de transporte

A nivel de programas parece oportuno introducir una referencia al Programa Marco Ambiental 2000-2006 que pretendiacutea establecer una Red de Corre-dores Ecoloacutegicos en la Comunidad Autoacutenoma de Euskadi destacable por su innovacioacuten y coheren-cia territorial Los objetivos fundamentales de este programa eran identificar las aacutereas prioritarias para la conexioacuten e integracioacuten territorial de los espa-cios naturales protegidos (corredores ecoloacutegicos) garantizar un grado de conectividad ecoloacutegica entre estos y en el conjunto del territorio establecer las pautas de gestioacuten para la conservacioacuten y mejora de la conectividad ecoloacutegica y finalmente establecer un punto de partida para la integracioacuten de los cri-terios de conectividad en la ordenacioacuten territorial Este programa ha tenido continuidad en el Progra-ma Marco Ambiental de la Comunidad Autoacutenoma de Euskadi 2007-2010 que entre sus liacuteneas principa-les de actuacioacuten incluye el avance en el desarrollo de la red de corredores ecoloacutegicos

En el aacutembito legislativo la anteriormente mencio-nada Ley 422007 del Patrimonio Natural y de la Biodiversidad (BOE nordm 299 de 14 diciembre 2007) define el papel de la conectividad en la conser-vacioacuten de la biodiversidad Las Administraciones Puacuteblicas preveraacuten en su planificacioacuten ambiental

[hellip] mecanismos para lograr la conectividad ecoloacute-gica del territorio estableciendo o restableciendo corredores [hellip] Para ello se otorgaraacute un papel prio-ritario a los cursos fluviales las viacuteas pecuarias las aacutereas de montantildea y otros elementos del territorio lineales y continuos [hellip] con independencia de que tengan la condicioacuten de espacios naturales prote-gidos Circunstancias que ponen de manifiesto la importancia de la restauracioacuten ecoloacutegica de las infraestructuras de transporte y su entorno inme-diato como elementos lineales y continuos Infra-estructuras que a la vez que vertebran el territo-rio causan importantes impactos ambientales en-tre los que destaca la destruccioacuten y fragmentacioacuten de haacutebitats La mitigacioacuten de estos efectos adver-sos es la base del disentildeo de numerosas medidas correctoras de impacto ambiental como las que se han planteado en los capiacutetulos precedentes de este libro

Despueacutes de este breve repaso a planes progra-mas y la referencia obligada a la Ley 422007 del Patrimonio Natural y de la Biodiversidad conviene retornar la escala de proyecto donde debe hacerse una mencioacuten expresa a la serie de documentos para la reduccioacuten de la fragmentacioacuten de haacutebitats cau-sada por infraestructuras de transporte (MMA 2006 MARM 2008 y MARM 2010) coordinado por la Di-reccioacuten General de Medio Natural y Poliacutetica Forestal (antes DG para la Biodiversidad) del Ministerio de Medio Ambiente y Medio Rural y Marino Aunque estos documentos no constituyen un texto legal su utilidad en las distintas fases del ciclo de vida de las infraestructuras se ha sentildealado en el Capiacute-tulo 8 del presente libro Por otro lado cada vez resulta maacutes habitual encontrar la referencia a dicha serie de documentos en el condicionado de las de-claraciones de impacto ambiental obligando asiacute a los proyectistas a tenerlos en cuenta En su nuacuteme-ro maacutes reciente el tercer libro de la serie aborda las fases de planificacioacuten y trazado de carreteras y ferrocarriles por su importancia para aplicar los principios de precaucioacuten y prevencioacuten identifica-dos como momentos clave para reducir los efectos de la fragmentacioacuten de los haacutebitats Desde la cita-da Direccioacuten General se siguen preparando nuevos documentos ordenando y recopilando los cono-cimientos sobre la materia en el momento actual que sirven de orientacioacuten a los teacutecnicos implicados en las distintas fases de redaccioacuten de proyectos Ademaacutes de experiencias reales se recopila infor-macioacuten sobre la utilidad de accesibles herramientas informaacuteticas (Conefor Sensinode Corredor Design Fragstats Alcor etc) que mediante el uso de siste-mas de informacioacuten geograacutefica permiten evaluar los

efectos de las infraestructuras sobre aspectos tales como la conectividad o definir corredores ecoloacutegi-cos analizar la idoneidad del haacutebitat etc

La consideracioacuten de la biodiversidad como variable ambiental abarca muchos maacutes aspectos que exce-den a un proyecto de infraestructuras que por lo general solo pueden ser atendidos en casos ex-cepcionales pero aun asiacute hay algunas cuestio-nes baacutesicas que resultan alarmante desatendidas como por ejemplo las medidas que figuran en el RD 2892003 (BOE nordm 58 de 8 de marzo de 2003) referidas a los materiales forestales de reproduc-cioacuten Si bien en los pliegos de prescripciones teacutecni-cas particulares de los proyectos es frecuente que se incluya una serie de requisitos a cumplir por las plantas y semillas a emplear en las labores de res-tauracioacuten en general referidas a su presentacioacuten aspecto ausencia de heridas etc no es frecuente que se repare en sus caracteriacutesticas fenotiacutepicas y geneacuteticas aunque esto uacuteltimo puede tener profun-das implicaciones en el eacutexito de los proyectos de restauracioacuten y sobre todo en coacutemo estos influyen en los ecosistemas aledantildeos (veacutease Capiacutetulo 6) El caso es que este material ya sea en forma de plan-tas o partes de las mismas cuando se destinan a fines distintos de la selvicultura basta con que porten una etiqueta o documento en el que figure la indicacioacuten lsquono destinado a usos forestalesrsquo para evitar que le sea de aplicacioacuten la citada normativa

4 Incendios forestales

Una buena parte de las formaciones vegetales medi-terraacuteneas deben su configuracioacuten al papel del fuego

(Pausas y Verduacute 2005 2008 Verduacute y Pausas 2007) sin embargo su recurrencia y el origen antroacutepico de la mayoriacutea de ellas obliga a distintas administracio-nes a que se establezcan medidas que condicionan sine die y en el espacio el manejo de la vegetacioacuten en el entorno de las carreteras Las comunidades autoacutenomas tienen transferidas desde la deacutecada de los ochenta las competencias de los planes de pre-vencioacuten y extincioacuten de incendios mientras que las Administracioacuten General del Estado conserva las labo-res de refuerzo de medios seguacuten la Ley 432003 de Montes (BOE nordm 280 de 22 de noviembre de 2003) y su posterior modificacioacuten por la Ley 102006 (BOE nordm 102 de 29 de abril de 2006) Ademaacutes la preven-cioacuten y seguridad en materia de incendios son muy heterogeacuteneas desde el punto de vista competencial en el sentido de que se insertan de forma transver-sal en mayor o menor medida en varios aacutembitos proteccioacuten civil medio ambiente urbanismo indus-tria etc

A modo de ejemplo el Decreto 1301998 (DOGC nordm 2656 de 9 de junio de 1998) de prevencioacuten de incendios forestales en las aacutereas de influencia de las carreteras en Cataluntildea en cuyo preaacutembulo se identifica a las viacuteas de comunicacioacuten proacuteximas a zonas forestales como uno de los lugares de ini-cio de muchos incendios forestales Con motivo de la prevencioacuten para la defensa contra los incendios forestales nos encontramos con una normativa especiacutefica que desarrolla el tratamiento de la ve-getacioacuten en las aacutereas colindantes con las viacuteas de comunicacioacuten para reducir la posibilidad de inicio de fuegos desde estas zonas para lo que se propo-ne reducir la carga de combustible Entendieacutendose por aacutereas de influencia una franja de 500 m que rodea las carreteras las autoviacuteas y las autopistas

Figura 10 Mapa de las regiones de procedencia de pino carrasco (Pinus halepensis) Modificado de BOE 2009

Figura 9 Ejemplo de utilizacioacuten de Conefor Sensinode para determinar la importancia para la conectividad de los haacutebitats con presencia de urogallo (Tetrao urogallus) en Leacuterida Corte-siacutea de Santiago Saura (Pascual y Saura 2008)

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de Cataluntildea sea cual sea su titularidad que trans-curran por terrenos que son forestales incluidos en los teacuterminos municipales declarados de alto riesgo de incendio forestal por el Decreto 641995 (DOGC nordm 2022 de 10 de marzo de 1995) si bien la norma tambieacuten diferencia los trabajos a realizar seguacuten la importancia de la viacutea de comunicacioacuten y el aacuterea que atraviese La citada normativa marca dos tipos de actuaciones a realizar alrededor de

las carreteras disminucioacuten de la carga de combus-tible y acciones sobre la vegetacioacuten maacutes piroacutefila Los organismos responsables de las carreteras o las empresas concesionarias de viacuteas o de elemen-tos funcionales de la carretera quedan obligados a mantener unas zonas de seguridad y de proteccioacuten en las condiciones determinadas en este Decreto en los terrenos que sean de dominio puacuteblico o pro-piedad de la Administracioacuten

Cuadro 3 A los efectos del Decreto 1301998 de la Generalitat de Catalunya se entiende por

a) Zona de seguridad

Franja de terreno libre de vegetacioacuten arbustiva herbaacutecea seca y de restos vegetales muertos En cuanto a la vegetacioacuten arboacuterea no podraacute suponer la continuidad entre las copas de ambos lados de la viacutea como tampoco la de la masa forestal colindante a cada lado La zona de seguridad se define de 1 m de anchura a partir del extremo exterior de la calzada En el caso de existir arcenes pavimentados la zona de seguridad de 1 m seraacute considerada a partir de la arista del pavimento La anchura de la zona de seguridad podraacute ser ampliada excepcionalmente en aquellos tramos de maacuteximo riesgo de incendios forestales la cual deberaacute ser especificada y justificada por la Direccioacuten General del Medio Natural previo informe del organismo responsable de la viacutea Esta anchura deberaacute definirse antes del 31 de diciembre de cada antildeo para poder incorporarla a las previsiones de conservacioacuten

b) Zona de proteccioacuten

Franja de una anchura miacutenima de 3 m en autoviacuteas y autopistas (anchura miacutenima de 2 m en el resto de carreteras) formada por una masa arbolada yo arbustiva clareada que evite la continuidad vertical y horizontal entre los estratos arbustivo y arboacutereo El recubrimiento de la masa arboacuterea deberaacute ser inferior al 75 del total En todos los casos esta distancia se contaraacute a partir de la liacutenea externa de la zona de seguridad definida anteriormente

Llegados a este punto conviene introducir algu-na duda sobre el papel de las infraestructuras de transporte en el origen de los incendios foresta-les diferenciando a su vez entre carreteras e in-fraestructuras ferroviarias Mientras que el traacuten-sito de trenes sobre las viacuteas de ferrocarril puede originar chispas que son causa documentada de numerosos incendios en el entorno de las liacuteneas del tren el papel de las carreteras como causa accidental de incendios puede resultar maacutes discu-tible Cabe recordar que el hecho de arrojar coli-llas desde la ventanilla de un vehiacuteculo es un acto punible achacable al comportamiento inciacutevico de

un usuario que ademaacutes se sanciona por la legisla-cioacuten vigente y debe perseguirse antes que limitar el desarrollo de la vegetacioacuten que rodea a las viacuteas donde se den estos comportamientos irrespon-sables Por otro lado algunas instituciones por ejemplo WWFAdena (2006) hace tiempo que ad-vierten sobre la necesidad de revisar la actual cla-sificacioacuten de causas de incendios forestales para reflejar mejor la realidad del problema De hecho Aacutelamo (2007) cita a los incendios forestales como ejemplo evidente donde la prevencioacuten no deberiacutea descuidar las causas y motivaciones de no pocos incendios provocados

Figura 11 En la imagen de la izquierda Monfraguumle (Caacuteceres) el estado de conservacioacuten de algunas sentildeales que no estaacuten directamente relacionadas con la seguridad vial puede denotar cierto desintereacutes sobre los aspectos ambientales (Foto Carlos Iglesias) En la imagen de la derecha rodal de vegetacioacuten arboacuterea aloacutectona (Pinus sp) afectado por un incendio en una margen de la autopista Reacutegis Bittancourt (Brasil) pese a que esta zona es de clima muy huacutemedo y con una vegetacioacuten potencial correspondiente a lsquoMata Atlaacutenticarsquo con muy escasos incendios (Foto Ignacio Mola)

Un caso similar de aplicacioacuten de actuaciones preven-tivas en el entorno de las carreteras es por ejemplo el que se recoge en un anuncio de licitacioacuten puacutebli-ca de la Direccioacuten General de Carreteras del Estado para la redaccioacuten del proyecto de desbroce y tala de aacuterboles en zona de dominio puacuteblico y taludes en toda la red de carreteras del Estado en la provin-cia de Lugo (BOE nordm 104 de 30 de abril de 2008) en cumplimiento de la Ley de prevencioacuten y defensa contra los incendios forestales de Galicia (DOG nordm 74 de 9 de abril de 2007) El artiacuteculo 21 de esta Ley establece la obligatoriedad de gestionar la biomasa vegetal en los terrenos incluidos en la zona de domi-nio puacuteblico de la red de autopistas autoviacuteas y viacuteas raacutepidas y carreteras

En todo caso las citadas comunidades autoacutenomas no son las uacutenicas donde se establecen zonas de influencia forestal de varios centenares de metros ni donde se obliga a los titulares de las infraes-tructuras de transporte a actuar sobre la vegetacioacuten de su entorno Por ejemplo en el caso de Andalu-ciacutea cuya Ley 51999 de prevencioacuten y lucha contra los incendios forestales (BOJA nordm 82 16 de julio de 1999) apenas incluiacutea una breve mencioacuten a las viacuteas de comunicacioacuten ha aprovechado su Reglamento de desarrollo para incorporar la obligacioacuten de mantener libres de residuos matorral y vegetacioacuten herbaacutecea durante las eacutepocas de peligro medio y alto (es decir desde el 1 de mayo hasta el 31 de octubre) tanto la zona de dominio puacuteblico como la de servidumbre de las carreteras viacuteas feacuterreas y otras viacuteas de co-municacioacuten Si bien antildeade que podriacutean mantenerse formaciones arboacutereas y arbustivas en las densidades que en su caso se establezcan

El coste de las anteriores medidas de prevencioacuten queda reflejado en el Plan de Autoproteccioacuten 2008-2010 de ADIF que ha supuesto una inversioacuten de maacutes de 900000 euros en la Comunidad Foral de Navarra en la prevencioacuten de incendios proacuteximos a los 199 km de red convencional en esta comunidad Este Plan incluye labores desbroce del estrato her-baacuteceo en una franja de 8 m a cada lado de la viacutea desbroce del matorral poda hasta 5 m de altura en los ejemplares arboacutereos y eliminacioacuten de los restos procedentes de desbroce y corta ademaacutes de riegos con herbicida sobre la plataforma ferroviaria mediante trenes herbicidas formados por vagones laboratorio de preparados quiacutemicos de almace-namiento de productos herbicidas y de almacena-miento de envases vaciacuteos y residuos (ABC 2010)

Figura 12 Siega parcial del talud de una autoviacutea conservando parte del estrato herbaacuteceo y un ejemplar arboacutereo sin podar (Foto Javier Martiacutenez de Castilla FERROVIAL-AGROMAacuteN)

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Retomando el grado de influencia que las normas de prevencioacuten de incendios forestales pueden tener a la hora de disentildear la restauracioacuten de las infraestructuras de transporte el Decreto 1301998 de la Generalitat de Catalunya preveacute que se incluyan como factores a tener en cuenta en la EIA de las nuevas infraestructu-ras mapas de combustibilidad continuidad de la masa forestal grados de inflamabilidad de la vegetacioacuten y anaacutelisis de los incendios producidos en las zonas que atraviesa la nueva viacutea de comunicacioacuten Por otro lado para la restauracioacuten de taludes se obliga a seleccionar especies de baja inflamabilidad que dificulten el ini-cio y la propagacioacuten del fuego (condicioacuten que no es extrantildeo encontrar en las declaraciones de impacto am-biental de infraestructuras localizadas tambieacuten en otras regiones) Algunos criterios que se establecen por De-creto para la seleccioacuten de especies son los siguientes

a) Evitar las especies que contengan aceites esen-ciales y otros compuestos orgaacutenicos volaacutetiles y altamente inflamables

b) Priorizar las especies que mantienen las hojas verdes y un alto contenido hiacutedrico en los tejidos durante el verano las que presentan una menor relacioacuten superficievolumen (plantas de estructura compacta) y las que generan pocos restos finos

c) Favorecer las especies cuyas hojas y los restos se descomponen con maacutes rapidez

d) Favorecer las especies de madera densa y alta capacidad caloacuterica que necesitan absorber una gran cantidad de calor antes de encenderse

Finalmente en el aacutembito de Cataluntildea cabe destacar la obligacioacuten de la Direccioacuten General del Medio Natural de elaborar un informe anual con relacioacuten a los incendios originados en las zonas de seguridad y de proteccioacuten de las carreteras de forma que se pueda tener un co-nocimiento preciso de los tramos de carretera donde se han producido estos incendios y de sus causas que deberaacute poner en conocimiento de los organismos res-ponsables y de las entidades municipales

5 Sanidad vegetal

Otro aspecto de importancia a la hora de seleccionar especies y durante las posteriores labores de manteni-miento tiene que ver con la materia fitosanitaria pues-to que los planes de lucha y prevencioacuten contra deter-minadas plagas y enfermedades de algunas especies vegetales pueden repercutir sobremanera en las espe-cies implantadas en taludes y otras zonas restauradas

de las infraestructuras de transporte El ejemplo por antonomasia en esta materia lo trae la enfermedad del fuego bacteriano una grave enfermedad de los vege-tales causada por la bacteria Erwinia amylovora La pri-mera referencia legal sobre el fuego bacteriano es el RD 12011999 (BOE nordm 184 de 3 de agosto de 1999) por el que se establece el programa nacional de erra-dicacioacuten y control del fuego bacteriano de las rosaacuteceas (modificado posteriormente por el RD 15122005 y maacutes recientemente por el RD 2462010) Espantildea estaacute con-siderada en el aacutembito territorial de la Unioacuten Europea como lsquozona protegidarsquo frente a la bacteria que causa la enfermedad de manera que no se considera esta-blecida en el territorio nacional Aunque es frecuente la deteccioacuten de focos en distintos aacutembitos de nuestra geografiacutea el RD 2462010 (BOE nordm 73 de 29 de marzo de 2010) ha suprimido el Anexo I del RD 12011999 donde se declaraban la provincia de Guipuacutezcoa y el centro y norte de Navarra como zonas donde la enfer-medad siacute se consideraba establecida Esta enfermedad afecta fundamentalmente a plantas de la familia de las rosaacuteceas ocasionando importantes peacuterdidas econoacutemi-cas por dantildeos directos en explotaciones de frutales de pepita en general y de manzano y peral en particular asiacute como en el sector de plantas ornamentales pertene-cientes a dicha familia El programa y sus medidas son de aplicacioacuten en todo el territorio nacional excepto en las zonas no protegidas que se determinen para las cuales seriacutean de aplicacioacuten las disposiciones estableci-das en su artiacuteculo 9 Ademaacutes conviene resaltar que las medidas adoptadas se declaran de utilidad puacuteblica de acuerdo con la Ley 432002 de sanidad vegetal (BOE nordm 279 de 21 de noviembre de 2002)

Entre las medidas preventivas se preveacute la realizacioacuten de estudios sistemaacuteticos por parte de las comunida-des autoacutenomas Si como consecuencia del resultado de las prospecciones o de la comunicacioacuten a la que quedan obligados particulares y entes puacuteblicos en el artiacuteculo 3 se confirmara la presencia de un foco inicial de fuego bacteriano ademaacutes de tenerse que declarar contaminada la zona de afeccioacuten la comu-nidad autoacutenoma estableceraacute una zona de seguridad alrededor del foco detectado que quedaraacute delimitada en funcioacuten de los conocimientos sobre la epidemiolo-giacutea de la enfermedad y de los meacutetodos de profilaxis especiacuteficos pero que en principio cubriraacute una exten-sioacuten miacutenima de un aacuterea circular de 1 km de radio Entre las medidas a adoptar en esa zona de seguridad se encuentra la prohibicioacuten de plantacioacuten o replanta-cioacuten de vegetales hospedantes a la enfermedad sin la expresa autorizacioacuten de la comunidad autoacutenoma mientras se mantenga vigente la zona de seguridad Entre los requisitos especiales para la introduccioacuten y desplazamiento de vegetales y productos vegetales

hospedantes de Erwinia amylovora en y por una zona protegida contra dicho organismo nocivo es precep-tivo el pasaporte fitosanitario de acompantildeamiento (modalidad zona protegida) tanto para el material originario de la zona protegida como para el intro-ducido desde una zona no protegida La enfermedad del fuego bacteriano genera repetitivos episodios de alarma en aacutembitos reducidos que finalmente se traducen a nivel autonoacutemico en una mayor presioacuten normativa sobre el empleo ornamental de algunas es-pecies vegetales de lo que en un principio se deduce de las medidas preventivas de la Legislacioacuten baacutesica Por todo ello seguacuten las circunstancias no resulta ex-trantildeo encontrar recomendaciones en algunos planes autonoacutemicos para que las consejeriacuteas competentes adopten medidas encaminadas a retirar determinadas especies ornamentales de los maacutergenes de las carre-teras de su titularidad

En este sentido en el aacutembito de La Rioja el De-creto 1052003 (BOR nordm 112 de 9 de septiembre de 2003) prohibiacutea por un periacuteodo de 5 antildeos la plan-tacioacuten de ornamentales hospedantes de los geacuteneros Chaenomeles Crataegus Eriobotrya Malus Mespilus Photinia Pyracantha Pyrus Sorbus y Stranvaesia en aceras medianas y zonas ajardinadas de carreteras autoviacuteas y jardines puacuteblicos de toda la Comunidad Autoacutenoma de La Rioja en el marco de la lucha contra el fuego bacteriano Posteriormente la Orden 112009 de la Consejeriacutea de Agricultura Ganaderiacutea y Desarro-llo Rural (BOR nordm 27 de 27 de febrero de 2009) ha extendido a las viacuteas o jardines puacuteblicos o privados la prohibicioacuten de plantar algunas especies ornamentales en el mencionado marco de la lucha contra el fuego bacteriano dentro del territorio de La Rioja En defi-nitiva el proyectista se encuentra una vez maacutes con restricciones legales para la seleccioacuten de especies y aunque quizaacutes no fueran las maacutes habituales para res-tauraciones en tramos interurbanos no debe omitirse el hecho de que la coincidencia de varias normas en este sentido puede originar situaciones contradicto-rias con las restauraciones propuestas durante la tra-mitacioacuten ambiental de este tipo de proyectos

6 Trasplantes

Una tendencia de especial importancia por su cues-tionable eficacia y el consumo de recursos econoacute-micos que representa cuando no responde a la sin-gularidad de alguacuten ejemplar que lo justifique es el trasplante indiscriminado de aacuterboles con motivo de la construccioacuten de una infraestructura de transporte No son extrantildeas las situaciones en las que debido al exceso de celo en la interpretacioacuten de una DIA el

criterio predominante de una supervisioacuten anoacutenima o sencillamente con motivo del nombre con que se designe una autoviacutea los redactores de proyectos se ven obligados a incluir el trasplante indiscriminado de pies arboacutereos a veces de especies o ejemplares de dudoso intereacutes El trasplante de arbolado cons-tituye una de las labores de arboricultura de mayor cuantiacutea econoacutemica y a fecha de hoy es difiacutecil su in-tegracioacuten en los tiempos reales de la obra civil Pese a ello no son pocas las recomendaciones por medio de instrucciones guiacuteas o incluso normativa oficial en las que se contempla el trasplante de arbolado como medida de aplicacioacuten general a incorporar en proyectos de infraestructuras de transporte

Figura 13 Trasplante de un cedro de grandes dimensiones en un entorno urbano

Aunque son escasos los informes en los que se ofrezcan datos del seguimiento de esta medida en el aacutembito de las infraestructuras de transporte los que logran alguna difusioacuten como Mendiburu y Septieacuten (2007) y Velasco et al (2008) parecen evidenciar que se trata de uno de los maacutes claros ejemplos de afec-cioacuten que deberiacutea motivar una modificacioacuten de traza-do en fase de estudio informativo si es que la exis-tencia de alguacuten aacuterbol o arboleda singular mereciese tal consideracioacuten antes que contemplar trasplantes indiscriminados en fase de proyecto de construccioacuten

La construccioacuten de infraestructuras de transporte implica ocupar parte del territorio atravesado e inevitablemente afecta de forma directa a la ve-getacioacuten que pudiera existir Si las afecciones pre-vistas no fueran asumibles el procedimiento de EIA no deberiacutea resolverse con una DIA positiva a cambio de proponer la realizacioacuten del trasplan-te masivo de los aacuterboles afectados Entre otros

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motivos porque si no hay correspondencia entre el coste de una medida correctora y su probabi-lidad de eacutexito se dantildea directamente a la credibi-lidad del propio procedimiento y de las medidas de restauracioacuten En otras ocasiones se propone su compensacioacuten mediante la plantacioacuten de nuevas unidades de vegetacioacuten que sustituyan a los pies afectados por la obra En todo caso se constata una tendencia creciente que obliga a incorporar en los proyectos este tipo de medidas Probable-mente sean recomendaciones inspiradas en algu-nos casos en la existencia de normas referidas a la proteccioacuten del arbolado urbano como por ejemplo la Ley 82005 de 26 de diciembre de Proteccioacuten y Fomento del Arbolado Urbano de la Comunidad de Madrid (BOCM nordm 312 de 31 de di-ciembre de 2005) Esta Ley prohiacutebe la tala de todos los ejemplares arboacutereos de cualquier especie con maacutes de 10 antildeos de antiguumledad o 20 cm de diaacuteme-tro de tronco al nivel del suelo que se ubiquen en

suelo urbano y se vean afectados por obras de reparacioacuten o reforma de cualquier clase o por la construccioacuten de infraestructuras debieacutendose pro-ceder a su trasplante Aunque si por razones teacutec-nicas dicho trasplante no fuera posible se podriacutea autorizar la tala del ejemplar afectado mediante decreto del alcalde singularizado para cada ejem-plar previo expediente en el que se acredite la inviabilidad de cualquier otra alternativa Ademaacutes en aquellos casos en los que la tala sea la uacutenica alternativa viable se exigiraacute en la forma en que se establezca la plantacioacuten de un ejemplar adulto de la misma especie por cada antildeo de edad del aacuterbol eliminado Es importante tener en cuenta el papel y las caracteriacutesticas de manejo de la vege-tacioacuten arboacuterea en diferentes medios debieacutendose reflexionar sobre la extrapolacioacuten de estas normas o recomendaciones concebidas para las zonas verdes del medio urbano al caso de las infraes-tructuras de transporte en el medio natural

IV CONCLUSIONES

Algunas normas sectoriales como el Reglamen-to General de Carreteras (RD 18121994) con-templan la necesidad de revisar perioacutedicamente para su actualizacioacuten permanente las normas e instrucciones teacutecnicas a las que deban sujetarse los trabajos y obras de construccioacuten de estas in-fraestructuras Este libro en su conjunto podriacutea funcionar como revulsivo para esta renovacioacuten pues se identifican problemas teacutecnicos vaciacuteos y contradicciones legales y se aportan bases cien-tiacuteficas en el aacutembito de la restauracioacuten ecoloacutegica de estas infraestructuras

La confeccioacuten de instrucciones de caraacutecter ambien-tal y de obligado cumplimiento en la fase de re-daccioacuten de proyectos actualizadas perioacutedicamen-te permite incorporar criterios baacutesicos adecuados a la realidad de los proyectos de infraestructuras de transporte En el sector ferroviario por ejem-plo la redaccioacuten de los proyectos de liacuteneas de alta velocidad se rige por las IGP de ADIF (y el equiva-lente manual para la redaccioacuten de proyectos de la DG de Infraestructuras Ferroviarias del Ministerio de Fomento) cuyo Capiacutetulo 6 estaacute reservado al Medio Ambiente

La aplicacioacuten estricta de algunas normas am-bientales crea un escenario muy complejo para el disentildeo de restauraciones viables que requiere ser debatido en profundidad Por ejemplo no se pueden seleccionar especies sin aceites o resinas y con contenidos hiacutedricos elevados durante el ve-rano simplemente por las caracteriacutesticas ecofisio-loacutegicas de la mayor parte de especies presentes en la Peniacutensula Por otro lado los protocolos de prevencioacuten contra incendios arruinan los trabajos de restauracioacuten poco tiempo despueacutes de su rea-lizacioacuten

Una evidencia en liacutenea con el capiacutetulo precedente sobre las implicaciones de las autorizaciones am-bientales en relacioacuten con la redaccioacuten de los pro-yectos es que entre el condicionado de la DIA y el contenido del proyecto existe una desvinculacioacuten del oacutergano ambiental que termina devaluando el objeto o la interpretacioacuten de los condicionados de muchas declaraciones Hay que tener en cuen-ta que la DIA es la verdadera desencadenante de todo lo relacionado con la restauracioacuten de infra-estructuras de transporte que estamos hablando sobre restauracioacuten ecoloacutegica

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BOE 1988 Real Decreto 11311988 de 30 de sep-tiembre por el que se aprueba el Reglamento para la ejecucioacuten de Real Decreto Legislativo 13021986

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BOE 2003 Ley 432003 de 21 de noviembre de Montes Jefatura del Estado Boletiacuten Oficial del Estado nordm 280 del saacutebado 22 de noviembre de 2003 41422 -41442 httpwwwboeesboedias20031122pdfsA41422-41442pdf

BOE 2004 Real Decreto 23872004 de 30 de di-ciembre por el que se aprueba el Reglamento del Sector Ferroviario Ministerio de Fomento Boletiacuten Oficial del Estado nordm 315 del viernes 31 de diciem-bre de 2004 42719-42763 httpwwwboeesboedias20041231pdfsA42719-42763pdf

BOE 2005 Real Decreto 15122005 de 22 de di-ciembre por el que se modifica el Real Decreto 12011999 de 9 de julio por el que se establece el programa nacional de erradicacioacuten y control del fue-go bacteriano de las rosaacuteceas Ministerio de Agricul-tura Pesca y Alimentacioacuten Boletiacuten Oficial del Estado nordm 312 del viernes 30 de diciembre de 2005 43140 -43141 httpwwwboeesboedias20051230pdfsA43140-43141pdf

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BOE 2007 Ley 422007 del Patrimonio Natural y de la Biodiversidad Jefatura del Estado Boletiacuten Oficial del Estado nordm 299 del viernes 14 diciem-bre 200751275-51327 httpwwwboeesboedias20071214pdfsA51275-51327pdf

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11Restauracioacuten ecoloacutegica e infraestructuras de transporte perspectivas y recomendaciones

Luis Balaguer Fernando Valladares Adriaacuten Escudero Ignacio Mola y Valentiacuten Alfaya

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Rest

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CAPIacuteTULO 11 Restauracioacuten ecoloacutegica e infraestructuras de transporte perspectivas y recomendaciones

Luis Balaguer Fernando Valladares Adriaacuten Escudero Ignacio Mola y Valentiacuten Alfaya

En el futuro la integracioacuten ambiental de las ca-rreteras y viacuteas feacuterreas seraacute parte del disentildeo de la infraestructura desde el inicio de la redaccioacuten del proyecto constructivo El disentildeo de la infraestructu-ra contemplaraacute los condicionantes ambientales del territorio que atraviesa El trazado de la viacutea se esta-bleceraacute en funcioacuten de la huella energeacutetica y de las emisiones del traacutefico rodado No seraacuten necesarias las medidas correctoras dado que la configuracioacuten final de la viacutea estaraacute integrada en los procesos eco-loacutegicos locales No se hablaraacute de impactos sino de reconfiguracioacuten del entorno Los taludes no seraacuten planos inclinados sino que el plano de la rasante estaraacute circundado por relieves semejantes a los pre-dominantes en el paisaje regional El efecto barrera de la viacutea seraacute utilizado para bloquear flujos no de-seados tanto hiacutedricos o de sedimentos como de organismos Las viacuteas no solo canalizaraacuten el movi-miento de pasajeros y mercanciacuteas sino que tambieacuten habilitaraacuten corredores ecoloacutegicos para la migracioacuten de polinizadores especies vulnerables o para la co-nexioacuten de poblaciones de organismos La carretera y la viacutea del tren seraacuten elementos de intereacutes tambieacuten para la construccioacuten del paisaje desde una pers-pectiva ecoloacutegica La propia construccioacuten de la viacutea seguiraacute un procedimiento diferente Actualmente se redactan proyectos cerrados que son replanteados a partir de la realidad en obra y corregidos mediante los frecuentes modificados En el futuro el proceso constructivo responderaacute a una estrategia adaptati-va en la que el responsable en obra adecuaraacute las propuestas en funcioacuten de la realidad que encuentra a medida que avanza la construccioacuten

Estos avances sucederaacuten y de alguna forma ya es-taacuten sucediendo impulsados por dos factores El pri-mero y el maacutes eficaz de los motores de cambio seraacute una nueva sensibilidad de los agentes sociales Se generaraacute una demanda que vincularaacute la exigencia ambiental con la calidad de vida de los ciudadanos El concepto mismo de calidad de vida evolucionaraacute y si por ejemplo ahora se identifica con calidad de vida la velocidad seguridad y el confort en el traacutensi-to por la viacutea en el futuro estas exigencias pareceraacuten evidentes y triviales y se ambicionaraacute circular a tra-veacutes de un paisaje funcional con valores educativos y patrimoniales El segundo motor seraacute el avance en el conocimiento cientiacutefico-teacutecnico El salto cua-litativo vendraacute de la mano de la incorporacioacuten de la visioacuten desde la ecologiacutea frente a planteamientos anteriores de inspiracioacuten marcadamente agronoacutemi-ca u ornamental con poco contexto bioloacutegico Por ejemplo frente a siembras y plantaciones prescri-tas por recetas de aplicacioacuten universal se optaraacute por soluciones locales que interpreten el relieve del espacio afectado y contemplen los movimientos de los organismos en el entorno de la infraestructura Se emplearaacute maquinaria adaptada a las nuevas exi-gencias capaces de construir superficies rugosas y estables frente a acabados lisos artificiales

Las limitaciones econoacutemicas no supondraacuten un obs-taacuteculo en la medida que se cambiaraacute el modo de realizar el balance En la actualidad los costes de construccioacuten pesan de forma diferencial En el futu-ro las administraciones y empresas concesionarias contemplaraacuten tambieacuten los costes reales y a largo plazo asociados con el mantenimiento de la infra-estructura como es el caso no ya de las siegas de los herbazales en las maacutergenes de la viacutea sino de las penalizaciones por cierre temporal de la infraestruc-tura por problemas teacutecnicos Incluso el cambio en la sensibilidad permitiraacute incorporar costes intangibles relevantes a escalas temporales mayores

Algunos de estos avances comienzan a vislumbrarse La trasposicioacuten de algunas directivas europeas a la normativa estatal invita a perfeccionar la integracioacuten de la infraestructura en su entorno en lugar de per-seguir la depuracioacuten de las medidas correctoras

En la actualidad el proyecto y el proceso cons-tructivo supeditan las cuestiones ambientales a las exigencias teacutecnicas y econoacutemicas Este plan-teamiento resulta en impactos hidroloacutegicos en las comunidades vegetales en la fauna en el paisaje etc que deben ser paliados mediante medidas co-rrectoras que elevan el coste de la obra Hoy por hoy mientras se opera el cambio de paradigma

las medidas preventivas y correctoras e incluso en ocasiones las compensatorias son evidentemen-te necesarias Su disentildeo y ejecucioacuten no obstante pueden revisarse desde una nueva perspectiva con el fin de mejorar su eficacia en teacuterminos de con-secucioacuten de objetivos y eficiencia en cuanto a la relacioacuten costesbeneficios Las actuales medidas tienen un gran margen de incertidumbre contrario a la concrecioacuten que persiguen los proyectos cons-tructivos y la inversioacuten econoacutemica asociada Es en este contexto donde el presente libro pretende ha-cer su aportacioacuten

La mayor parte del conocimiento actual sobre el comportamiento ecoloacutegico de los espacios afectados por obras civiles se ha obtenido en poco maacutes de una deacutecada Entre las conclusiones relevantes alcanza-das desde esta perspectiva destacan

bull El perfil plano de los taludes es inestable

bull Los desmontes y terraplenes representan dos extremos en un gradiente de estreacutes-pro-ductividad

bull El reclutamiento de plantas en desmontes se produce en pequentildeas depresiones y oquedades

bull El contenido en nitroacutegeno de la tierra vegetal extendida en terraplenes explica el desarrollo de la cobertura vegetal en los primeros antildeos

bull Las comunidades vegetales densas de terra-plenes acogen un menor nuacutemero de espe-cies vegetales que las formaciones abiertas de los desmontes mostrando que cobertura y diversidad no van con frecuencia de la mano y por tanto hay que priorizar o lo uno o lo otro

bull Las hidrosiembras fracasan en desmontes y no son necesarias en condiciones favorables

bull La introduccioacuten de especies o ecotipos exoacuteti-cos en las mezclas de hidrosiembra comprome-te el establecimiento de las especies nativas

bull La llegada espontaacutenea de semillas es un or-den de magnitud mayor que el aporte de una hidrosiembra convencional

bull La gran mayoriacutea de las semillas que alcanzan un talud proceden de fragmentos proacuteximos de vegetacioacuten ruderal y arvense

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IacuteNDICE

bull La mayor parte de las especies vegetales que habitan en los taludes han sido dispersadas por el viento o la gravedad con escaso con-curso de animales dispersores

bull Las infraestructuras lineales generan una frag-mentacioacuten de las poblaciones de fauna que puede atenuarse mediante soluciones teacutecni-cas que aumenten la permeabilidad de la viacutea

Tanto la aplicacioacuten de las medidas correctoras como la investigacioacuten desde una perspectiva ecoloacutegica si-guen en gran medida enfocadas en el disentildeo de so-luciones a escala de talud En cuanto a las primeras se evaluacutean y facturan las hidrosiembras por metros cuadrados y se alternan los moacutedulos de plantacioacuten a lo largo del talud y las medianas En cuanto a la investigacioacuten se analizan las limitaciones para el asentamiento de la cubierta vegetal en parcelas cir-cunscritas a los taludes Asiacute se ha venido trabajando en los gradientes de disponibilidad de nutrientes o agua en el talud y en la respuestatolerancia de los vegetales frente a las condiciones locales Habitual-mente solo han escalado hasta el nivel de paisaje los estudios sobre movimientos de fauna y los toda-viacutea incipientes estudios sobre dispersioacuten de semillas y polinizacioacuten En el futuro las soluciones teacutecnicas avaladas por las conclusiones alcanzadas en los tra-bajos de investigacioacuten se orientaraacuten sin embargo hacia la escala del paisaje Asiacute el intereacutes de que esteacuten presentes determinadas especies no radicaraacute en que aportan mayor o menor cobertura sino en su significado a escala de paisaje quizaacutes como recurso para otros organismos de intereacutes que habiten en los maacutergenes de la viacutea quizaacutes como conector de pobla-ciones desvinculadas por la distancia quizaacutes como atractor de especies animales que aportan semillas o propaacutegulos de los que no se venden en los viveros comerciales o simplemente por constituir el mismo talud un refugio para especies que se han extinguido a escala de paisaje y regional

La necesidad de que las soluciones teacutecnicas se di-sentildeen a escala de paisaje vendraacute impuesta por los nuevos objetivos que se les exigiraacuten a los trabajos de integracioacuten ambiental Estos objetivos no seraacuten otros que la provisioacuten de ciertos servicios ecosisteacute-micos a un amplio espectro de potenciales benefi-ciarios de la existencia y funcionamiento de la viacutea El Millenium Ecosystem Assessment (2005) agrupa estos servicios en cuatro bloques de regulacioacuten de soporte de provisioacuten y culturales Pongamos al-gunos ejemplos de los servicios ecosisteacutemicos que podriacutea ofrecer una exitosa restauracioacuten ecoloacutegica de los espacios afectados por una carretera o viacutea feacuterrea

En relacioacuten con los servicios de regulacioacuten iquestpode-mos disentildear la integracioacuten ambiental de los taludes y otras zonas afectadas o generadas por la obra para que favorezcan la infiltracioacuten del agua de lluvia y la recarga de los acuiacuteferos Una eficaz infiltracioacuten reduciriacutea la erosioacuten en manto y la arroyada Pero en este contexto de la regulacioacuten la viacutea podriacutea utili-zarse como elemento de ordenacioacuten hidroloacutegica del territorio aumentando la extensioacuten de una cuenca vertiente o incluso canalizando la escorrentiacutea des-de una cuenca hacia otra

En relacioacuten con los servicios de soporte la restau-racioacuten de determinadas comunidades vegetales en los taludes podriacutea estar orientada por ejemplo a favorecer la propagacioacuten de polinizadores Estos po-linizadores podriacutean alcanzar asiacute en mayor nuacutemero los campos de cultivo y aumentar el rendimiento de las cosechas Las maacutergenes de las viacuteas podriacutean reproducir haacutebitats que funcionaran como refugio para especies de intereacutes como recurso geneacutetico O podriacutean habilitar los flujos de especies causados por un cambio climaacutetico o por la peacuterdida de su haacutebitat en origen Podriacutean ser corredores ecoloacutegicos con funciones ecoloacutegicas que permitieran movimientos de organismos alliacute donde estaacuten interrumpidos por la transformacioacuten del territorio (agricultura urbani-zacioacuten etc)

En relacioacuten con los servicios de provisioacuten la extensa superficie total que representa la suma de los es-pacios ocupados por taludes de carretera y de viacuteas feacuterreas es en siacute misma un recurso En la actuali-dad ese espacio es productivo pero la produccioacuten representa un coste en lugar de un beneficio En concreto el elevadiacutesimo coste de las siegas Coste elevado en ambientes mediterraacuteneos que alcanza niveles increiacutebles bajo climas maacutes favorables para el desarrollo de los vegetales iquestPodriacutea producirse en las maacutergenes de las viacuteas alguacuten bien que representara no solo un ingreso para los gestores de la infraestructu-ra sino un auteacutentico recurso para la poblacioacuten local Hoy en diacutea solo se cultivan los taludes en paiacuteses en desarrollo pero algunos paiacuteses avanzados como Holanda permiten el pastoreo de ovejas en los ta-ludes con lo que evitan las siegas Las opciones son muchas iquestPodriacuteamos generar biocombustibles o pacas de paja uacutetiles para la construccioacuten de determi-nados tipos de edificaciones

En relacioacuten con los servicios culturales el corte de la superficie terrestre que con frecuencia conlleva la construccioacuten de la viacutea pone al descubierto evi-dencias de extraordinario valor educativo y cientiacute-fico Son bien conocidos los enclaves en los que

la excavacioacuten de los desmontes dejoacute al descubierto una conspicua falla como la de El Molar (Madrid) o un singular pliegue como el lsquopliegue Zaleskirsquo tam-bieacuten en El Molar La construccioacuten de la viacutea no solo descubre peculiaridades geoloacutegicas sino tambieacuten restos arqueoloacutegicos y paleontoloacutegicos Fue la exca-vacioacuten para la construccioacuten de un tren la que des-tapoacute entre Atapuerca e Ibeas de los Juarros (Burgos) el yacimiento maacutes importante de la historia de la humanidad en Europa Pero ademaacutes y con indepen-dencia de las sorpresas que encierre la superficie de la tierra la restauracioacuten ecoloacutegica de los taludes de infraestructuras lineales podriacutea llegar a ambicio-nar la recuperacioacuten de paisajes En la actualidad nuestra silueta de humanos se recorta con frecuen-cia cotidiana sobre la superficie de taludes yermos o revestidos con cubiertas verdes anodinas El paisaje que podriacutea recrearse serviriacutea como recurso educa-tivo eso que ves se parece a una dehesa o a un hayedo o son espartales o sabinares o cardonales con tabaibas Nuestro devenir se enmarcariacutea en la singularidad de nuestro paisaje lo cual se opone a la extravagancia del gunitado a la vulgaridad cos-mopolita del asfalto del horizonte enladrillado o de los espacios perifeacutericos degradados La creacioacuten de estos espacios marginales genera usos marginales la construccioacuten de paisajes de calidad genera usos de calidad La recreacioacuten de paisajes en el entorno de la viacutea podriacutea cobrar un valor patrimonial es decir de herencia de nuestros ascendientes y por tanto tener un significado de identidad es decir de reco-nocimiento de los rasgos propios de cada colectivi-dad en interaccioacuten secular con su territorio Circular por una carretera permitiriacutea a los usuarios hacer tu-rismo no como lo hacen las mercanciacuteas sino perci-biendo el mosaico ecoloacutegico y cultural de la comarca que atraviesan

lsquoTout ce qursquoune personne peut imaginer un jour quelqursquoun le reacutealiserarsquo (Todo lo que una persona puede imaginar un diacutea alguien lo realizaraacute) como dijo el visionario Julio Verne La cuestioacuten es quieacuten o quieacutenes seraacuten los que lo realicen los artiacutefices del cambio de paradigma iquestA quieacuten corresponde ser pro-activo iquestQuizaacutes a las administraciones como respon-sables de una gestioacuten ambientalmente sostenible iquestA las administraciones como cadena de transmisioacuten del cambio en el nivel de exigencia de la sociedad iquestO seraacuten las empresas movidas por la buacutesqueda de nuevos mercados y de valores antildeadidos que les per-mitan competir con ventaja frente a otras anquilosa-das en los planteamientos convencionales

iquestExiste actualmente alguna ingenieriacutea o consul-tora capaz de redactar proyectos integrados en el

entorno y que ofrezcan servicios ecosisteacutemicos a la poblacioacuten En un futuro proacuteximo ingenieriacuteas cons-tructoras y concesionarias basaraacuten la calidad dife-rencial de su oferta en criterios ambientales Cons-truir carreteras y viacuteas feacuterreas cada vez se hace mejor se hace maacutes barato y cada vez lo hace maacutes gente Lo que todaviacutea no se hace es utilizar bases ecoloacute-gicas para integrar funcionalmente la infraestructura en el territorio que atraviesa Actualmente muchos interpretan este discurso como el de la dialeacutectica entre hacerlo maacutes barato o hacerlo ambientalmente maacutes ambicioso En el futuro descubriremos que lo ambientalmente maacutes ambicioso es a la larga lo maacutes barato Descubriremos como dice Paul Royal que lo estable es bueno y es bonito y que lo bonito y bueno es estable En el pasado se paseaba y en la actualidad solo se pasa Quizaacutes seamos en el futuro capaces de recuperar nuestro intereacutes por el propio camino

Con la intencioacuten de alentar el avance hacia otra for-ma de hacer las cosas este libro propone las si-guientes recomendaciones

Recomendacioacuten 1

La caracterizacioacuten del medio fiacutesico (litologiacutea cli-ma relieve suelo flora y vegetacioacuten fauna pai-saje medio social y cultural) debe ir orientada al diagnoacutestico de los factores que condicionan cada una de las soluciones teacutecnicas en cada uno de los enclaves singulares generados durante el proceso de construccioacuten de la infraestructura Por ejemplo el estudio del sustrato del clima y de la matriz deben permitir la toma de decisiones sobre si se hace una hidrosiembra y sobre cuaacuteles seriacutean las especies maacutes adecuadas a utilizar No tiene sentido el afaacuten enciclopeacutedico de reunir la maacutexi-ma cantidad de informacioacuten en el menor tiempo posible sobre todo si luego falta tiempo para su anaacutelisis criacutetico

Recomendacioacuten 2

El anaacutelisis de la termopluviometriacutea previo a cual-quier proyecto de restauracioacuten deberiacutea incluir va-riables hasta ahora no habituales en este tipo de estudios tales como el lsquoiacutendice de torrencialidadrsquo o el lsquopunto de marchitezrsquo del suelo Tales variables pueden llegar a ser maacutes limitantes para el eacutexito de la hidrosiembra que la precipitacioacuten media anual u otras habitualmente empleadas

En climas mediterraacuteneos la planificacioacuten de la obra deberiacutea facilitar la ejecucioacuten de hidrosiembras en

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el otontildeo como eacutepoca preferente en lugar de en primavera particularmente en zonas de inviernos suaves

Recomendacioacuten 3

Nunca deben proponerse soluciones generales su-puestamente vaacutelidas para el conjunto de los talu-des de la obra Desmontes y terraplenes son dos universos distintos como lo son los espacios que estuvieron ocupados por parques de maquinaria las superficies bajo pasos elevados o las medianas Cada uno de ellos requiere una solucioacuten teacutecnica in-dividualizada

Recomendacioacuten 4

Las hidrosiembras y plantaciones no son siempre necesarias Es preciso evaluar los costesbeneficios de la aplicacioacuten de estas teacutecnicas y evitarlas alliacute donde la calidad de la tierra vegetal y el grado de conservacioacuten del entorno son favorables asiacute como en aquellos enclaves o periodos del antildeo en los que las condiciones son tan desfavorables que la incer-tidumbre es muy elevada en comparacioacuten con el es-fuerzo e inversioacuten que conllevan

Recomendacioacuten 5

Debe prestarse especial atencioacuten a la combinacioacuten en el coacutectel de hidrosiembra de semillas pioneras (lsquostartersrsquo) junto con autoacutectonas de crecimiento len-to Las primeras pueden inhibir el crecimiento de las segundas cancelando los beneficios que se preten-diacutean alcanzar encareciendo notablemente el precio de la mezcla de semillas

Una adecuada diversidad en la mezcla favoreceraacute el proceso de sucesioacuten y facilitaraacute la estabilidad del sistema en el medio y largo plazo

Recomendacioacuten 6

El grado de integracioacuten ambiental no se mide al peso No se estaacuten haciendo mejor las cosas por in-crementar en el proyecto la potencia del extendido de tierra vegetal ni por incluir un mayor porcentaje de especies autoacutectonas en el coacutectel de hidrosiembra ni por exigir un porcentaje maacutes alto de cobertura vegetal El grado de integracioacuten ambiental debe ser evaluado por profesionales capaces de medir la co-nexioacuten con el entorno los flujos que interrumpe y que canaliza la infraestructura los servicios ambien-tales que ofrece y las consecuencias ambientales in situ y ex situ

Recomendacioacuten 7

Deben sopesarse cuidadosamente las actuaciones de dudosa eficacia tales como la instalacioacuten de ma-llas metaacutelicas redes tridimensionales de materiales plaacutesticos o redes de yute en desmontes de pendien-te mayor a 32 No ha podido demostrarse que estas medidas favorezcan el rendimiento de la hidrosiem-bra en taludes ubicados en climas mediterraacuteneos ni tan siquiera que reduzcan el efecto de la erosioacuten en el medio y largo plazo (en particular aquellas estruc-turas biodegradables)

Recomendacioacuten 8

Los elementos del sistema original que han sido el resultado de un proceso histoacuterico irrepetible ndasho que requeririacutea deacutecadas o siglosndash deben ser conservados en obra como bienes capaces de garantizar el eacutexito de las medidas correctoras En la construccioacuten de infraestructuras lineales estos elementos histoacuteri-cos son dos En primer lugar la tierra vegetal tanto por su fertilidad (contenido en nitroacutegeno disponible para los vegetales) como por su banco de semi-llas y formas de resistencia si se adecua su manejo en obra para conservar dicho banco Y en segundo lugar los fragmentos de vegetacioacuten conservada en las inmediaciones (cabeceras de desmontes pies de terraplenes) como fuente de diaacutesporas que alcan-zaraacuten de forma espontaacutenea y gratuita los taludes y medianas

Recomendacioacuten 9

La adecuada gestioacuten y posterior extendido de la tierra vegetal es siempre la medida correctora maacutes eficiente para la revegetacioacuten de los taludes con es-pecies herbaacuteceas de cuantas pueden acometerse en obra Es importante que el origen de la tierra sea local aunque su calidad agronoacutemica no sea suficien-te debido a que de esta manera se aporta el banco de semillas propio de las condiciones ecoloacutegicas del entorno En este sentido la tierra vegetal deberiacutea extraerse solo a partir de la capa maacutes superficial del terreno tras desbrozar (solo los primeros 5-10 cm en la mayor parte de los suelos estudiados en lugar de los 20-25 que se recomiendan actualmente en los proyectos)

Recomendacioacuten 10

Las actuales praacutecticas de gestioacuten de los acopios de tierra vegetal especialmente los abonados siembras y riegos no tienen efectos positivos En realidad contribuyen a diluir el banco y a reducir el nuacutemero

de semillas viables al inducir su germinacioacuten antes de que se realice el extendido

Recomendacioacuten 11

Debe cuidarse el espesor del extendido de tierra vegetal Extendidos de maacutes de 10 cm de potencia pueden generar problemas de inestabilidad y de enterramiento a excesiva profundidad de las semi-llas viables Circunstancias ambas que reducen la eficacia de la tierra vegetal a la hora de alcanzar los objetivos de revegetacioacuten de los taludes

Recomendacioacuten 12

Las especies lentildeosas pueden ser una buena alterna-tiva a las herbaacuteceas para revegetar taludes en am-bientes con elevado estreacutes hiacutedrico y suelos pobres Para ello las preparaciones someras del suelo de-ben ser descartadas y es fundamental emplear plan-ta de buena calidad morfoloacutegica y fisioloacutegica que haya sido cultivada a partir de semillas obtenidas de la zona de trabajo o de zonas ambientalmente si-milares Debe desterrarse la costumbre de supeditar los trabajos de revegetacioacuten a la inauguracioacuten de la obra llenando el espacio de lsquoverdersquo con la planta-cioacuten de plantas grandes y vistosas cultivadas en ma-ceta que deforman las raiacuteces No se estaacute haciendo un jardiacuten sino integrando ecoloacutegicamente la infra-estructura en el territorio La plantacioacuten de especies lentildeosas no finaliza con la plantacioacuten sino que el desarrollo adecuado de las plantas se garantiza con una serie de cuidados especiacuteficos

Recomendacioacuten 13

Las medidas correctoras en relacioacuten con la fauna deben disentildearse a escala de paisaje conectan-do flujos reales y deben estar fundadas en las

recomendaciones sobre la eficacia de los distintos pasos de fauna

Recomendacioacuten 14

La cicloacutepea inversioacuten de recursos humanos teacutecnicos y econoacutemicos realizada en la construccioacuten de la red de viacuteas feacuterreas y para el traacutefico rodado debe aprovechar-se para generar nuevo conocimiento sobre coacutemo inter-venir eficazmente en el medio sobre los nuevos esce-narios que los humanos estamos generando y sobre nosotros mismos y nuestra actividad en el medio

Recomendacioacuten 15

Es fundamental que el conocimiento sobre la dinaacute-mica de los espacios afectados por infraestructuras lineales y el eacutexito de los tratamientos y medidas preventivas correctoras y compensatorias no se ge-nere exclusivamente mediante el meacutetodo de mejora continua basado en la mecaacutenica del ensayo error Es esencial que estos procedimientos se complementen con otros mucho maacutes eficaces conocidos como de gestioacuten adaptativa en los que el meacutetodo contras-ta hipoacutetesis concretas utilizando parcelas control y disentildeos experimentales propios de la investigacioacuten cientiacutefica

Recomendacioacuten 16

Es necesario promover escenarios efectivamente interdisciplinares donde los diversos condicio-nantes de caraacutecter teacutecnico normativo etc sean conocidos por todos los actores participantes en las distintas fases del ciclo de vida de una infra-estructura con el objeto de diagnosticar y corregir ineficacias y contradicciones en las fases de redac-cioacuten de proyectos construccioacuten y explotacioacuten de las infraestructuras

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1Fuentes recomendadas de informacioacuten adicional

Anexo

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ANEXO 1 Fuentes recomendadas de informacioacuten adicional

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Ministerio de Medio Ambiente y Medio Rural y Marino Seccioacuten Biodiversidad Conectividad ecoloacutegica en el territorio Fragmentacioacuten Esta paacutegina web da acceso a todos los documentos elaborados por la Comisioacuten Teacutecnica del Grupo de Trabajo de Fragmentacioacuten de

Haacutebitats causada por Infraestructuras de Transporte httpwwwmmaesportalseccionesbiodiversidadde-sarrollo_rural_paisajefragmentacion_ruralindexhtm

Infra Eco Network Europe Red europea constituida por diferentes organizaciones institutos y expertos unidos por un intereacutes comuacuten que es el fenoacutemeno de la fragmentacioacuten de haacutebitats causado por la cons-truccioacuten de infraestructuras lineales de transporte httpwwwcbmsluseiene

International Conference on Ecology and Transporta-tion (ICOET) Interesante paacutegina web para estar al diacutea de los uacuteltimos avances en temas relacionados con los distintos impactos generados por las infraestructuras de transporte Permite el acceso a todos los trabajos presentados en esta conferencia que se celebra cada dos antildeos httpwwwicoetnetindexasp

Road Ecology Center de la Universidad de Davis California (EEUU) Portal de acceso de este centro especializado Ofrece informacioacuten muy variada no solo de sus investigaciones tambieacuten de congresos y seminarios interesantes relacionados con estos temas y ademaacutes poseen un buscador bibliograacutefico muy completo httproadecologyucdavisedu

The Reforestation reforestation and genetic resour-ces team (RNGR Team) Paacutegina web con gran canti-dad de informacioacuten sobre cultivo de plantas y teacutecni-cas de reforestacioacuten httpwwwrngrnet

Atlas de Idoneidad de especies lentildeosas de la Peniacuten-sula Ibeacuterica Puede ser uacutetil para ver si las especies lentildeosas elegidas son climaacuteticamente idoacuteneas para la zona de revegetacioacuten httpwwwopengisuabcatIdoneitatPIindexhtml

Servicio de extensioacuten Forestal de la Universidad de Oregon Tiene algunas publicaciones sobre planta-cioacuten y preparacioacuten del suelo httpextensionore-gonstateeducatalogdetailsphpsortnum=0520ampname=Reforestation

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ANEX

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2Sobre los autores y revisores del libro

Anexo

IacuteNDICE

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IacuteNDICE

ANEXO 2 Sobre los autores y revisores del libro

Este libro ha sido el resultado de una labor colectiva que ha permitido reunir experiencias y conocimien-tos dispares y complementarios en un tema que em-pieza a consolidarse aunque todaviacutea de forma frag-mentaria A continuacioacuten se describen brevemente los perfiles de los maacutes de treinta autores implicados en la obra y se indican los revisores externos de los textos e ideas incluidas en esta edicioacuten Todos los autores han participado en varias reuniones de coordinacioacuten de los capiacutetulos y han servido de revi-sores internos de uno o varios capiacutetulos adicionales a los que han participado para armonizar contenidos y estructura

Editores

Fernando Valladares es doctor en Ciencias Bioloacutegi-cas profesor de investigacioacuten del Consejo Superior de Investigaciones Cientiacuteficas (CSIC) y profesor aso-ciado de la Universidad Rey Juan Carlos Su investi-gacioacuten se centra en la ecologiacutea de los sistemas natu-rales afectados o amenazados por el cambio global y dedica importantes esfuerzos al estudio y a la do-cencia de aspectos relacionados con su restauracioacuten Actualmente su direccioacuten de trabajo es Centro de Museo Nacional de Ciencias Naturales CSIC Serrano 115 dpdo 28006 Madrid Maacutes informacioacuten en wwwvalladaresinfo E-mail valladaresccmacsices

Luis Balaguer Nuacutentildeez es profesor titular de Univer-sidad del Departamento de Biologiacutea Vegetal I de la Facultad de Biologiacutea de la Universidad Complutense de Madrid Es especialista en restauracioacuten ecoloacutegica

que entiende como una disciplina que se apoya en tres pilares la conservacioacuten del capital natural orientada a la provisioacuten de bienes valores y servi-cios ecosisteacutemicos la integracioacuten holiacutestica que con-templa ademaacutes de criterios cientiacuteficos criterios so-cioeconoacutemicos valores culturales y personales y la gestioacuten adaptativa entendida como estrategia para el manejo de sistemas complejos Maacutes informacioacuten en httplinneobioucmesbalaguer

Ignacio Mola Caballero de Rodas es licenciado en Ciencias Bioloacutegicas En la actualidad coordina los proyectos de investigacioacuten nacionales e internacio-nales en restauracioacuten de espacios afectados por obra civil desarrollados por la Direccioacuten de Innovacioacuten y Desarrollo de OHL Colabora en la docencia de tres maacutesteres oficiales y varias asignaturas en distintas universidades puacuteblicas de la Comunidad de Madrid Desde 2005 desarrolla su actividad investigadora en el aacutembito de la restauracioacuten ecoloacutegica de infraestruc-turas de transporte (UCM 910314) Actualmente su direccioacuten de trabajo es Servicio de I+D+i - OHL Pordm de la Castellana 259-D 28046-Madrid E-mail imo-laohles

Adriaacuten Escudero es doctor en Ciencias Bioloacutegicas y catedraacutetico de ecologiacutea en la Universidad Rey Juan Carlos Su intereacutes cientiacutefico se centra en diversos aspectos de ecologiacutea de poblaciones y comunidades de plantas Su investigacioacuten y docencia se enfocan con frecuencia a problemas ambientales concretos dentro del campo de la biologiacutea de la conservacioacuten Actualmente su direccioacuten de trabajo es Departamen-to de Biologiacutea y Geologiacutea Escuela Superior de Cien-cias Experimentales y Tecnologiacutea Universidad Rey Juan Carlos 28933 Madrid Maacutes informacioacuten en httpwwwesceturjcesbiodiversos E-mail adrianescuderourjces

Valentiacuten Alfaya es Licenciado en Ciencias Bioloacutegicas y diplomado en Ingenieriacutea y Gestioacuten Medioambien-tal por la EOI Trabajoacute en el sector forestal y de ingenieriacutea para pasar posteriormente a la construc-tora Ferrovial Agromaacuten donde se responsabilizoacute de la implantacioacuten del primer sistema de gestioacuten ambiental disentildeado para el sector En 2002 fue nombrado director de Calidad Prevencioacuten y Medio Ambiente y pasoacute a formar parte del Comiteacute de Di-reccioacuten Desde 2004 ocupa el puesto de director de Calidad y Medio Ambiente de Grupo Ferrovial Ha sido miembro de la Plataforma Tecnoloacutegica Europea de la Construccioacuten del Comiteacute de Medio Ambiente de la patronal de empresas constructoras (SEOPAN) y del Strategic Advisory Group de ISO entre otras instituciones Forma parte de la Comisioacuten de Medio

Ambiente de la CEOE y es secretario del comiteacute ejecutivo de Green Building Council Espantildea Im-parte docencia en diversas escuelas de negocios y centros universitarios Asimismo desarrolla su tesis doctoral en el Departamento de Biologiacutea Vegetal de la Universidad Complutense de Madrid E-mail valentinalfayaferroviales

Autores

Saturnino de Alba Alonso es doctor en Ciencias pro-fesor titular en el Departamento de Geodinaacutemica de la Universidad Complutense de Madrid y miembro del Instituto de Geociencias (CSIC-UCM) Su activi-dad cientiacutefica se centra en la conservacioacuten de suelos en medios agriacutecolas y forestales y en escenarios de restauracioacuten de espacios fuertemente modificados por actividades humanas como es el caso de las in-fraestructuras lineales Actualmente su direccioacuten de trabajo es Departamento de Geodinaacutemica Facultad de Ciencias Geoloacutegicas Universidad Complutense de Madrid CJoseacute Antonio Novais sn 28040 Madrid E-mail sdealbageoucmes

Jesuacutes Aacutelvarez es ingeniero de Caminos Canales y Puertos por la Universidad Politeacutecnica de Madrid y maacutester en Gestioacuten Ambiental por la EOI Es direc-tor de Medio Ambiente de Cintra Infraestructuras empresa liacuteder en la gestioacuten de infraestructuras de transporte con maacutes de 2500 kiloacutemetros de autopis-tas distribuidas por diferentes paiacuteses de Europa y Ameacuterica E-mail jalvarezcintraes

Francisco Xavier Artigas Iraegui es ingeniero de Mon-tes e ingeniero teacutecnico forestal por la Universitat de Lleida Su vida laboral se ha centrado en los uacuteltimos antildeos en la evaluacioacuten ambiental de planes progra-mas y proyectos principalmente de infraestructuras lineales Actualmente su direccioacuten de trabajo es Ofi-cina Territorial de Evaluacioacuten Ambiental Servicios Te-rritoriales del Departamento de Medio Ambiente y Vi-vienda en Tarragona Vidal i Barraquer 12-14 43005 Tarragona E-mail xavierartigasgencatcat

Fernando Barbero Abolafio es licenciado en Cien-cias Geoloacutegicas e investigador predoctoral en la Universidad Complutense de Madrid Su investiga-cioacuten se centra en la erosioacuten hiacutedrica en suelos de clima mediterraacuteneo Actualmente estaacute estudiando los procesos de erosioacuten hiacutedrica que tienen lugar en taludes de carretera de la Cuenca de Madrid para poder aplicar criterios geomorfoloacutegicos y tratamien-tos al suelo que prevengan la erosioacuten hiacutedrica y fa-vorezcan una correcta revegetacioacuten Su direccioacuten de

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IacuteNDICE

trabajo es Departamento de Geodinaacutemica Facultad de Ciencias Geoloacutegicas Universidad Complutense de Madrid CJoseacute Antonio Novais 28040 Madrid E-mail ferbarabgeoucmes

Esther Bochet es doctora en Biologiacutea por la Universi-dad Catoacutelica de Lovaina (KUL Beacutelgica) Tras ser con-tratada por el programa Ramoacuten y Cajal disfruta en la actualidad de un contrato de doctora en el Centro de Investigaciones sobre Desertificacioacuten (CIDE) donde desarrolla sus investigaciones sobre las interaccio-nes entre vegetacioacuten y erosioacuten del suelo asiacute como su aplicacioacuten a la restauracioacuten de ecosistemas me-diterraacuteneos semiaacuteridos degradados Actualmente su direccioacuten de trabajo es Centro de Investigaciones sobre Desertificacioacuten-CIDE Carretera de Moncada a Naacutequera km 45 Apdo Oficial 46113 Moncada (Va-lencia) E-mail estherbochetuves

Valentiacuten Contreras Medrano es ingeniero teacutecnico agriacute-cola Director General del Grupo de empresas Bonte-rra Ibeacuterica ndash Paisajes del Sur (BPS GROUP) para el tratamiento integral del suelo Experto en materiales y teacutecnicas de restauracioacuten del paisaje ha desarrollado su actividad teacutecnica y empresarial desde 1992 E-mail valentincontrerasbonterraibericacom

Jordi Cortina Segarra es profesor titular de Ecologiacutea en la Universidad de Alicante Su trabajo se ha concen-trado en el estudio de la degradacioacuten de los ecosis-temas semiaacuteridos y su restauracioacuten Actualmente estaacute estudiando el funcionamiento de algunos ecosistemas mediterraacuteneos asiacute como teacutecnicas para la restauracioacuten de ecosistemas degradados incluyendo algunas fases de la produccioacuten de planta en vivero y la utilizacioacuten de residuos orgaacutenicos para la recuperacioacuten de la ferti-lidad de suelos degradados E-mail jordiuaes

Tiacutescar Espigares Pinilla es profesora titular de Ecolo-giacutea de la Universidad de Alcalaacute Su investigacioacuten se centra en el estudio de la ecohidrologiacutea de ecosis-temas restaurados con especial eacutenfasis en las inte-racciones entre vegetacioacuten y escorrentiacutea superficial en los procesos de sucesioacuten ecoloacutegica Asimismo ha analizado la aplicacioacuten de la evaluacioacuten del impac-to ambiental en Espantildea en lo referente a proyectos de infraestructuras lineales Departamento de Eco-logiacutea Universidad de Alcalaacute Campus Universitario Ctra Madrid-Barcelona Km 33600 28871 Alcalaacute de Henares (Madrid) E-mail mtiscarespigaresuahes

Joacirco Paulo Fernandes es licenciado en Ingenieriacutea Am-biental en 1983 en la Universidad Nueva de Lisboa donde se doctoroacute en 1992 en Ciencias Ambientales Actualmente es profesor asociado en la Universidad

de Eacutevora y responsable de la Licenciatura en Inge-nieriacutea Biofiacutesica Es especialista en temas de Ingenie-riacutea Natural y de Caracterizacioacuten y Evaluacioacuten Ambien-tal habiendo desarrollado investigaciones en estos campos y participado como Consultor en numerosos Estudios de Evaluacioacuten de Impacto Ambiental y Pro-cesos de Planificacioacuten Es fundador y presidente de APENA ndash Asociacioacuten Portuguesa de Ingenieriacutea Natu-ral

Jorge Fort Llaacutecer es ingeniero agroacutenomo con espe-cialidad en Ciencias del Suelo y Gestioacuten del Medio Ambiente Desde 1998 es director teacutecnico del Depar-tamento de Medio Ambiente de la empresa Projar SA que cuenta entre sus proyectos con numerosas teacutecnicas de revegetacioacuten de taludes E-mail jorgeprojares

Pablo Garciacutea-Palacios es licenciado en Ciencias Ambientales por la Universidad Rey Juan Carlos e investigador predoctoral del proyecto EXPERTAL fi-nanciado por la Fundacioacuten Biodiversidad CSIC Uni-versidad Rey Juan Carlos y Cintra SA Actualmente realiza su tesis doctoral sobre las implicaciones de las interacciones planta-suelo en la restauracioacuten de taludes de carretera Su direccioacuten de trabajo es Universidad Rey Juan Carlos Escuela Superior de Ciencias Experimentales y Tecnologiacutea Aacuterea de Bio-diversidad y Conservacioacuten Despacho II-230 CTuli-paacuten sn 28933 Moacutestoles (Madrid) E-mail pablopalaciosurjces

Patricio Garciacutea-Fayos es investigador cientiacutefico del Consejo Superior de Investigaciones Cientiacuteficas (CSIC) y desarrolla su actividad profesional en el Centro de Investigaciones sobre Desertificacioacuten-(CIDE) desde 1989 Su intereacutes investigador se centra fundamentalmente en los procesos de colonizacioacuten vegetal en ecosistemas mediterraacuteneos y semiaacuteridos y en la ecologiacutea y evolucioacuten de la interaccioacuten entre las plantas y la erosioacuten del suelo Actualmente su direccioacuten de trabajo es Centro de Investigaciones sobre Desertificacioacuten-CIDE Carretera de Moncada a Naacutequera km 45 Apdo Oficial 46113 Moncada (Va-lencia) E-mail PatricioGarcia-Fayosuves

Carlos Iglesias Merchaacuten es ingeniero de Montes (UPM) y licenciado en Ciencias Ambientales (UAM) posee larga experiencia en la redaccioacuten de proyectos y estudios de impacto ambiental de infraestructuras de transporte actualmente en ACCIONA INGENIERIacuteA (antes AEPO) y en vigilancia ambiental de obra Ade-maacutes es profesor asociado de la Universidad Politeacutec-nica de Madrid y actual presidente de ECOPAacuteS Ac-tualmente su direccioacuten de trabajo es ECOPAacuteS Apdo

de Correos 150 28760 Tres Cantos (Madrid) E-mail carlosiglesiasmerchanaccionaes

Juan E Malo Arraacutezola es doctor en Ciencias Bioloacute-gicas y profesor titular de Ecologiacutea de la Universi-dad Autoacutenoma de Madrid forma parte del Grupo de Ecologiacutea y Conservacioacuten de Sistemas Terrestres del Departamento de Ecologiacutea de dicha universidad Su intereacutes se centra en las interacciones ecoloacutegicas en-tre la fauna y las actividades humanas con especial atencioacuten en la evaluacioacuten de impacto ambiental de las infraestructuras y la fragmentacioacuten de haacutebitats E-mail jemalouames

Joseacute Francisco Martiacuten Duque es doctor en Ciencias Geoloacutegicas profesor titular en el Departamento de Geodinaacutemica de la Universidad Complutense de Ma-drid y miembro del Instituto de Geociencias (CSIC-UCM) Su intereacutes se centra en el establecimiento de criterios geomorfoloacutegicos para la restauracioacuten y re-habilitacioacuten de terrenos afectados por movimientos de tierras (como mineriacutea o infraestructuras lineales) Actualmente su direccioacuten de trabajo es Departamen-to de Geodinaacutemica Facultad de Ciencias Geoloacutegicas Universidad Complutense de Madrid CJoseacute Antonio Novais 28040 Madrid

Javier Martiacutenez de Castilla Colomer es ingeniero agroacute-nomo por la Universitat Politeacutecnica de Catalunya Jefe del Departamento de Medio Ambiente de la Direccioacuten Teacutecnica de Ferrovial Agromaacuten desarrolla desde 1986 toda su actividad en la evaluacioacuten ambiental y disentildeo de medidas en el aacutembito de la obra civil tanto en Espantildea como Reino Unido Estados Unidos Portugal Irlanda Polonia e Italia entre otros paiacuteses Miembro del Comiteacute de Medio de la Asociacioacuten Teacutecnica de la Carretera E-mail jmcastillaferroviales

Marisa Martiacutenez Diacuteez es ingeniera teacutecnica forestal por la Universidad Politeacutecnica de Madrid En los uacuteltimos 17 antildeos ha desarrollado su actividad pro-fesional en el sector medioambiental Actualmente trabaja en la empresa Ingenieriacutea de los Recursos Na-turales (IRENA) como jefe del Departamento Teacutecnico participando en obras y proyectos de restauracioacuten paisajiacutestica jardineriacutea y trabajos forestales E-mail mmartinezgrupopacsaes

Cristina Mata Estacioacute es investigadora posdoctoral del Grupo de Ecologiacutea y Conservacioacuten de Sistemas Terres-tres del Departamento de Ecologiacutea de la Universidad Autoacutenoma de Madrid Su principal aacuterea de investiga-cioacuten se centra en el seguimiento y evaluacioacuten de medi-das correctoras destinadas a reducir la fragmentacioacuten de haacutebitats causada por infraestructuras de transporte

Luis Merino Martiacuten es licenciado en Ciencias Ambien-tales y doctor en Cambio Global y Desarrollo Soste-nible por la Universidad de Alcalaacute Su investigacioacuten se centra en ecohidrologiacutea de ecosistemas degrada-dos particularmente los derivados de la restaura-cioacuten minera Actualmente trabaja en restauracioacuten de bosques tropicales en Guatemala Departamento de Ecologiacutea Universidad de Alcalaacute Campus Universita-rio Ctra Madrid-Barcelona Km 33600 28871 Alcalaacute de Henares (Madrid) E-mail luismerinouahes

Mariano Moreno de las Heras es investigador post-doctoral en la Universidad de Newcastle (Australia) Licenciado en Ciencias Ambientales y Doctor por la Universidad de Alcalaacute Sus investigaciones se centran en aspectos ecohidroloacutegicos de ambientes aacuteridos y semiaacuteridos particularmente en las interacciones en-tre la dinaacutemica vegetal y los procesos hidroloacutegicos superficiales (erosioacuten y sedimentacioacuten generacioacuten de escorrentiacutea y distribucioacuten espacial de la hume-dad del suelo) en el marco actual de cambios en el clima y los usos del territorio Faculty of Engineer-ing and Built Environment School of Engineering The University of Newcastle Callaghan NSW 2308 Australia E-mail MarianoMorenodelasherasnew-castleeduau

Joseacute Manuel Nicolau Ibarra es profesor titular de Ecologiacutea en la Universidad de Zaragoza Su inves-tigacioacuten se centra en ecohidrologiacutea de ambientes semiaacuteridos y de aacutereas mineras restauradas y en di-sentildeos geomorfoloacutegicos para restauraciones mineras Escuela Politeacutecnica Superior de Huesca Universidad de Zaragoza Carretera de Cuarte sn 22071 Huesca E-mail nicolauunizares

Begontildea Peco es doctora en Biologiacutea en 1982 y cate-draacutetica de Ecologiacutea de la Universidad Autoacutenoma de Madrid Tiene maacutes de 100 publicaciones cientiacuteficas muchas de ellas en revistas de impacto internacional como Journal of Ecology Oikos Journal of Vegetation Science Landscape Ecology etc y ha dirigido siete tesis doctorales y numerosos proyectos fin de carrera y fin de maacutester Especialista en dinaacutemica de la vege-tacioacuten herbaacutecea con eacutenfasis en la dispersioacuten de semi-llas estructura y dinaacutemica de los bancos de semillas y supervivencia de plaacutentulas Actualmente su direccioacuten de trabajo es Departamento de Ecologiacutea Universidad Autoacutenoma de Madrid 28049 Cantoblanco Madrid E-mail begonnapecouames

Joseacute Luis Quero es licenciado en Biologiacutea por la Universidad de Coacuterdoba doctor en Biologiacutea Ambiental por la Universidad de Granada e in-vestigador de la Universidad Rey Juan Carlos Sus

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liacuteneas de trabajo se centran en la ecologiacutea de co-munidades vegetales y su relacioacuten con la ecolo-giacutea funcional con especial intereacutes en la aplica-cioacuten de sus resultados a la restauracioacuten Actual-mente su direccioacuten de trabajo es Departamento de Biologiacutea y Geologiacutea Escuela Superior de Ciencias Experimentales y Tecnologiacutea Universidad Rey Juan Carlos 28933 Moacutestoles Madrid E-mail joseque-rourjces

Santiago Soliveres Codina es doctor en Ciencias Ambientales por la Universidad Rey Juan Carlos Realiza su trabajo en el marco del proyecto EXPER-TAL financiado por la Fundacioacuten Biodiversidad CSIC Universidad Rey Juan Carlos y Cintra SA Su especialidad es el estudio de las interacciones planta-planta y su aplicacioacuten a la restauracioacuten E-mail santiagosoliveresurjces

Jaume Tormo es doctor en Biologiacutea su tesis doc-toral tratoacute sobre restauracioacuten de taludes de carre-teras Actualmente disfruta de un contrato Juan de la Cierva en la Universidad de Alicante Su trabajo se centra en el estudio de la ecologiacutea y la restau-racioacuten de ambientes semiaacuteridos Actualmente su direccioacuten de trabajo es IMEM Ramon Margalef-Universidad de Alicante Carretera San Vicente del Raspeig sn 03690 San Vicente del Raspeig ndash Ali-cante E-mail jautorblagmailcom

Pedro Villar-Salvador es doctor en Biologiacutea por la Universidad de Valencia y actualmente es profesor de Ecologiacutea en el Departamento de Ecologiacutea de la Universidad de Alcalaacute Tambieacuten es editor asocia-do de la revista cientiacutefica New Forests Su intereacutes cientiacutefico son la ecologiacutea funcional y ecofisiologiacutea de plantas lentildeosas mediterraacuteneas asiacute como las teacutecnicas de cultivo en vivero e implantacioacuten en campo de la vegetacioacuten lentildeosa mediterraacutenea Su direccioacuten de contacto es Departamento de Ecolo-giacutea Universidad de Alcalaacute 28871 Alcalaacute de Hena-res (Madrid) E-mail pedrovillaruahes

Revisores externos

bull Revisor externo del Capiacutetulo 2

Avelino Garciacutea Investigador del CIEMAT Madrid

bull Revisor externo del Capiacutetulo 4

Antonio Gallardo Correa Profesor titular de la Uni-versidad Pablo de Olavide Sevilla

bull Revisores externos del Capiacutetulo 5

Montse Jorba Peiroacute Investigadora Fundacioacuten Bosch Gimpera Departamento de Biologiacutea Vege-tal Facultad de Biologiacutea Universidad de Barce-lona

Carolina Martinez Ruiz Profesora titular de la Univer-sidad de Valladolid Aacuterea de Ecologia (Departamento de Ciencias Agroforestales) ETSIIAA de Palencia Campus ldquoLa Yuterardquo Palencia

bull Revisores externos del Capiacutetulo 6

Luis Ocantildea Bueno Jefe de Departamento de Medio Natural Direccioacuten Adjunta de I+D+i RampD Unit Grupo Tragsa C Juliaacuten Camarillo 6b - planta 4ordf - sector d 28037 Madrid

Roberto Ontantildeoacuten Bioacutelogo Iniciativas Medioambien-tales IMAVE SL C El Cantildeo 5 24231 Cembranos Leoacuten

bull Revisores externos del Capiacutetulo 8

Encarna Peacuterez Aguilera Direccioacuten General de Carrete-ras e Infraestructuras Consejeriacutea de Fomento Junta de Castilla y Leoacuten

Salvador Peris Aacutelvarez y Viacutector Colino Rabanal De-partamento de Biologiacutea Animal Parasitologiacutea Ecolo-giacutea Edafologiacutea y Quiacutemica Agriacutecola Facultad de Bio-logiacutea Universidad de Salamanca

bull Revisores externos del Capiacutetulo 9

Rafael Escribano Bombiacuten Profesor titular del Depar-tamento de Proyectos y Planificacioacuten Rural Universi-dad Politeacutecnica de Madrid

Germaacuten Glariacutea Galceraacuten Director de la EUIT Forestal y ex director general de Calidad y Evaluacioacuten Am-biental del Ministerio de Medio Ambiente

bull Revisores externos del Capiacutetulo 10

Mauricio Goacutemez Villarino Doctor ingeniero de Ca-minos Canales y Puertos IDOM - Director Corpo-rativo

Santiago Gonzaacutelez Alonso Catedraacutetico de Proyectos y Planificacioacuten y ex subdirector general de Planifi-cacioacuten y Normativa del Ministerio de Obras Puacuteblicas y Urbanismo

Fernando Valladares

Luis Balaguer

Ignacio Mola

Adriaacuten Escudero

Valentiacuten Alfaya

Restauracioacuten ecoloacutegica de aacutereas afectadaspor infraestructuras de transporte

Vivimos en un mundo atravesado por carreteras liacuteneas de tren gasoductos y tendidos eleacutectricos Aunque nos hemos acostumbrado a ello los sistemas naturales no En este libro se revisan los impactos principales de la alteracioacuten ambiental que implica la creacioacuten y el uso de las infraestructuras lineales y se abordan los principales criterios cientiacutefi cos para reconducir y atenuar estos impactos Pero el libro no es solo un tratado cientiacutefi co sino que incluye ingredientes clave como los aspectos teacutecnicos y el marco legal para que sirva de referencia uacutetil y completa a quienes les interese la restauracioacuten ecoloacutegica de estos nuevos ecosistemas generados con la construccioacuten de infraestructuras lineales El libro busca estimular la interaccioacuten feacutertil entre cientiacutefi cos y teacutecnicos para abordar un tema ambiental legal social y econoacutemicamente complejo como es el de queacute ocurre y queacute conviene hacer con las aacutereas afectadas por estas infraestructuras Para contribuir a esta interaccioacuten el libro reuacutene el trabajo y la experiencia de maacutes de treinta expertos y recopila la informacioacuten de numerosos proyectos tanto de investigacioacuten como de construccioacuten y de restauracioacuten aportando una seleccioacuten clave de referencias bibliograacutefi cas y recursos disponibles en internet

Fortuny 7 28010 MadridT 91 121 09 2o F 91 121 09 31biodiversidadfundacion-biodiversidadeswwwfundacion-biodiversidades

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Los editores de este libro auacutenan experiencias profesionales complementarias incluso contrastadas ya que mientras tres de ellos provienen del aacutembito acadeacutemico los otros dos realizan su trabajo en el seno de empresas privadas Los cinco comparten el intereacutes por el impacto de las infraestructuras lineales sobre el medio natural y llevan muchos antildeos recopilando informacioacuten y participando en diversos proyectos con el fi n de comprender mejor estos impactos y como atenuarlos Las ideas teoacutericas desde el campo de la ecologiacutea que Fernando Valladares Luis Balaguer y Adriaacuten Escudero han ido destilando como resultado de su investigacioacuten han debido combinarse por un lado con el conocimiento de la realidad a pie de obra que Valentiacuten Alfaya ha acumulado durante el seguimiento de numerosos proyectos de construccioacuten y por otro con la experiencia de Ignacio Mola quien auacutena ambos intereses cientiacutefi cos y de empresa como coordinador de proyectos en restauracioacuten de I+D+i en el aacutembito de la construccioacuten y explotacioacuten de infraestructuras La necesidad de combinar visiones y experiencias les ha llevado a colaborar con frecuencia y el resultado de ese cruce feacutertil entre la ciencia y la teacutecnica entre el mundo de las ideas y el marco tozudo de una realidad compleja es lo que ha dado origen a este libro

Restauracioacuten ecoloacutegica de aacutereas afectadas

por infraestructuras de transporte

Bases cientiacutefi cas para soluciones teacutecnicas

  • IacuteNDICE
      1. IacuteNDICE 2
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          1. IacuteNDICE 4
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Page 3: Restauración ecológica de áreas afectadas por

Restauracioacuten ecoloacutegica de aacutereas afectadaspor infraestructuras de transporte

Fernando Valladares | Luis Balaguer | Ignacio Mola

Adriaacuten Escudero | Valentiacuten Alfaya

Bases cientiacuteficas para soluciones teacutecnicas

Proacutelogos 7

Agradecimientos 11

1 Restauracioacuten ecoloacutegica e infraestructuras de transporte definiciones problemas y desafiacuteosLuis Balaguer Fernando Valladares e Ignacio Mola 15

2 Consideraciones geomorfoloacutegicas e hidroloacutegicasJoseacute F Martiacuten Duque Saturnino de Alba y Fernando Barbero Abolafio 43

3 Ecohidrologiacutea erosioacuten hiacutedrica y dinaacutemica de la vegetacioacuten en laderas artificialesJoseacute Manuel Nicolau Tiscar Espigares Mariano Moreno de las Heras y Luis Merino-Martiacuten 75

4 Importancia del suelo para la restauracioacuten de la cubierta vegetalPablo Garciacutea-Palacios 85

5 Procesos ecoloacutegicos y restauracioacuten de la cubierta vegetalEsther Bochet Pablo Garciacutea-Palacios Begontildea Peco Jaume Tormo y Patricio Garciacutea-Fayos 101

6 Introduccioacuten de especies lentildeosasPedro Villar-Salvador Santiago Soliveres y Joseacute Luis Quero 143

7 Ecotecnologiacutea aplicada a la restauracioacuten de infraestructuras de transporteSantiago Soliveres Valentiacuten Contreras Joatildeo Paulo Fernandes Jordi Cortina Pablo Garciacutea-Palacios Marisa Martiacutenez y Jorge Fort 177

8 Actuaciones para minimizar los efectos sobre la faunaJuan E Malo y Cristina Mata 213

9 Seguimiento y vigilancia ambientalCarlos Iglesias Santiago Soliveres Valentiacuten Alfaya Je-suacutes Aacutelvarez Ignacio Mola Javier Martiacutenez de Castilla y Xavier Artigas 243

10 LegislacioacutenCarlos Iglesias Luis Balaguer Ignacio Mola y Valentiacuten Alfaya 275

11 Restauracioacuten ecoloacutegica e infraestructuras de transporte perspectivas y recomendacionesLuis Balaguer Fernando Valladares Adriaacuten Escudero Ignacio Mola y Valentiacuten Alfaya 303

Anexo 1 Fuentes recomendadas de informacioacuten adicional 311

Anexo 2 Sobre los autores y revisores del libro 317

Restauracioacuten ecoloacutegica de aacutereas afectadas por infraestructuras de transporte Bases cientiacuteficas para soluciones teacutecnicas

Publicado por

Fundacioacuten Biodiversidad

Editores

Fernando Valladares Luis Balaguer Ignacio Mola Adriaacuten Escudero y Valentiacuten Alfaya

Esta publicacioacuten ha sido posible gracias a la colaboracioacuten de

Ferrovial S A Priacutencipe de Vergara 135 - 28002 Madrid (Espantildea) Tel (+34) 91 586 25 00 wwwferrovialcom

Obrascoacuten Huarte Laiacuten S A Torre Espacio Paseo de la Castellana 259D - 28046 Madrid (Espantildea) Tel (+34) 91 348 41 00 wwwohles

Disentildeo maquetacioacuten e impresioacuten

AGSM Artes Graacuteficas wwwagsmartesgraficases

Depoacutesito Legal AB-338-2011

Fotografiacuteas las fotografiacuteas que aparecen en este libro son propiedad exclusiva de sus autores En caso de no sentildealarse expliacutecitamente su autoriacutea pertenecen a los autores del capiacutetulo correspondiente

Cita recomendada

Valladares F Balaguer L Mola I Escudero A y Alfaya V eds 2011 Restauracioacuten ecoloacutegica de aacutereas afectadas por infraestructuras de transporte Bases cientiacuteficas para soluciones teacutecnicas Fundacioacuten Biodiversidad Madrid Espantildea copyFundacioacuten Biodiversidad 2011

Impreso en papel certificado FSCreg

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PROacuteLO

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Teresa Ribera RodriacuteguezSecretaria de Estado de Cambio ClimaacuteticoVicepresidenta de la Fundacioacuten Biodiversidad

La conservacioacuten de la ldquodiversidad de la vidardquo como define la biodiversidad el Convenio sobre Diversidad Bioloacutegica se ha revelado como un componente cla-ve del desarrollo sostenible Del buen funcionamien-to de los ecosistemas depende el futuro econoacutemico social y cultural del paiacutes Sin embargo las presiones que amenazan esta diversidad son numerosas Entre otros factores el aumento de infraestructuras linea-les de transporte ha sido identificado como uno de los motivos de peacuterdida de biodiversidad relevantes en la actualidad

Las infraestructuras viarias son el escenario en el que cada diacutea se desenvuelven millones de perso-nas La superficie que ocupan en Espantildea ha tenido un ritmo de crecimiento exponencial en las uacuteltimas deacutecadas suponiendo en la actualidad alrededor de 1 del territorio El avance que estas suponen en teacuterminos de movilidad y de impulso econoacutemico debe ir acompantildeado de una evaluacioacuten ambiental para co-nocer sus consecuencias sobre el patrimonio natural y la biodiversidad y de esta forma buscar foacutermulas que permitan minimizar sus impactos tal como estaacute previsto por la legislacioacuten de evaluacioacuten ambiental

Desde el Ministerio de Medio Ambiente y Medio Rural y Marino trabajamos para preservar el buen estado de los ecosistemas y para restaurar su fun-cionalidad como viacutea para mantener los importantes servicios que prestan a la sociedad Por ello somos conscientes de la importancia de seguir avanzando

en la integracioacuten de las poliacuteticas sectoriales en este caso las poliacuteticas de movilidad y transporte con las poliacuteticas ambientales Es un reto que nos compete a todas las administraciones y cuyas exigencias baacute-sicas nos marca la ley 422007 de 13 de diciembre del Patrimonio Natural y de la Biodiversidad y la legislacioacuten vigente sobre evaluacioacuten ambiental

Por ello a traveacutes de la Fundacioacuten Biodiversidad y desde el 2006 se ha trabajado en colaboracioacuten con el Consejo Superior de Investigaciones Cientiacuteficas la Universidad Rey Juan Carlos y Cintra para desarro-llar el proyecto EXPERTAL ldquoElaboracioacuten de las bases experimentales para la sostenibilidad ecoloacutegica de los taludes de autopistasrdquo El objetivo ha sido esta-blecer las bases ecoloacutegicas que regulan el desarro-llo de las comunidades vegetales en los taludes de carreteras y autopistas en las distintas condiciones ambientales de la Peniacutensula Ibeacuterica

Este libro recoge las conclusiones de este estudio Aunque se ha querido ir maacutes allaacute para ofrecer un texto completo que recopile y sintetice los trabajos de otros grupos de investigacioacuten Desde estas liacuteneas queremos agradecer a todos los que han intervenido su valiosa aportacioacuten Estamos convencidos de que serviraacute para disentildear ejecutar y mantener los taludes de las infraestructuras lineales de transporte de una manera maacutes eficiente Como bien concluye el libro el futuro pasa por tener infraestructuras maacutes sostenibles y mejor integradas en el entorno que les rodea

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IacuteNDICE

PROacuteLO

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Luis Garciacutea-Linares GarciacuteaDirector General Corporativo del Grupo OHL

Supone para miacute un placer presentar este libro que creo que viene a cubrir una carencia en la literatura divul-gativa y teacutecnica en restauracioacuten de espacios afectados por la construccioacuten de infraestructuras Me gustariacutea por ello agradecer en primer lugar a la Fundacioacuten Biodiver-sidad la oportunidad brindada para hacerlo realidad

Se trata esta de una disciplina joven pero a la que se intuye una creciente relevancia si consideramos algunos de los datos que se exponen de forma rigu-rosa a lo largo de estas paacuteginas Asiacute aspectos como el porcentaje que suponen en los paiacuteses desarrolla-dos los espacios afectados por las infraestructuras sobre el total de su superficie o el volumen de mo-vimiento de tierra que generan en su construccioacuten comparado con los producidos por los fenoacutemenos geoloacutegicos tradicionales invitan a dejar de pensar en ellos como meras superficies marginales Todo ello unido a la singularidad de los ecosistemas ge-nerados con estas actuaciones ofrece una nueva perspectiva acerca de la importancia que supone para nuestras sociedades ampliar el conocimiento sobre estas materias y acerca de la responsabilidad con que deben actuar todos los agentes implicados

Consciente de esta realidad el Grupo OHL especializa-do en construccioacuten y explotacioacuten de infraestructuras a nivel internacional lleva implicado activamente desde 2003 en la I+D relacionada con la integracioacuten ambiental y la reduccioacuten del impacto de esta enfocada a identifi-car y desarrollar las medidas y teacutecnicas maacutes adecuadas y con menores incertidumbres en su resultado

Para recorrer este camino en OHL hemos tenido el privilegio de establecer una colaboracioacuten continua-da con el prestigioso equipo de investigacioacuten del Dr Luis Balaguer de la Universidad Complutense de Madrid que tambieacuten ha participado activamente en la preparacioacuten de este libro que el lector tiene entre sus manos Tras maacutes de 8 antildeos abordando proyec-tos en comuacuten se ha logrado cristalizar un equipo mixto de investigacioacuten integrado por profesionales de la universidad y de la empresa que rompe el toacute-pico de la falta de comunicacioacuten entre ambos mun-dos Esta colaboracioacuten nos ha permitido optimizar el retorno de los trabajos de I+D+i en forma de experiencia y resultados aplicados progresivamen-te en nuestras liacuteneas de produccioacuten (construccioacuten y explotacioacuten)

Hasta el momento la liacutenea de investigacioacuten indus-trial en restauracioacuten de espacios afectados por la construccioacuten de infraestructuras de OHL ha dado lugar a dos proyectos finalizados otros tantos en curso y alguno maacutes en fase de lanzamiento Se tra-ta de una liacutenea asentada exitosa y con proyeccioacuten internacional que ha aportado a este libro algunos resultados relevantes

Por uacuteltimo me gustariacutea felicitar y agradecer sus aportaciones a todos los autores que han traslada-do su conocimiento y experiencia a estas paacuteginas que estoy seguro supondraacuten una valiosa referencia teacutecnica y cientiacutefica en el futuro de esta incipiente y ciertamente relevante disciplina

Iacutentildeigo Meiraacutes Amusco Consejero Delegado de Ferrovial

En tiempos las carreteras se construiacutean adaptaacutendo-se a la topografiacutea del terreno respetando las curvas de nivel de los accidentes geograacuteficos que atrave-saban De esta manera el trazado se adecuaba al relieve y en cierto sentido al paisaje circundante minimizando el impacto medioambiental de estas infraestructuras Actualmente las nuevas autopistas y ferrocarriles suponen indiscutibles mejoras para la calidad de vida poblaciones antes lejanas se han aproximado en la misma medida en que se ha incre-mentado la velocidad de los vehiacuteculos que circulan por nuestras infraestructuras mejorando ademaacutes la seguridad para los usuarios y para los habitantes de la zona Pero al mismo tiempo los trazados se han hecho maacutes exigentes implicando en ocasiones ingentes movimientos de tierras que conllevan la al-teracioacuten de los ecosistemas que se asentaban en el entorno de la nueva infraestructura

La mitigacioacuten de este impacto pasa como es sabido por la restauracioacuten de los ecosistemas dantildeados si no en su integridad siacute en una medida suficiente como para recuperar una gran parte de su valor en teacuterminos ecoloacutegicos funcionales y por queacute no tambieacuten cultu-rales Por ello todos los agentes que intervenimos di-rectamente en la planificacioacuten disentildeo y construccioacuten de estas infraestructuras estamos obligados a encon-trar soluciones cada vez maacutes eficientes para restaurar el medio natural afectado por las obras

Hace casi dos deacutecadas el profesor Jourdain se pre-guntaba ldquoiquestPor queacute querer imponer una cubierta ve-getal proyeccioacuten de nuestra imaginacioacuten sobre un

terreno para el que la Naturaleza tiene ya su propio proyectordquo En Ferrovial una de las mayores empresas de infraestructuras del mundo estamos convencidos de que el disentildeo de mejores medidas de restauracioacuten ambiental pasa sin duda por entender queacute hace la propia naturaleza para reconstruir los sistemas afecta-dos por un impacto de estas caracteriacutesticas Con toda seguridad los proyectos de restauracioacuten maacutes eficien-tes teacutecnica y econoacutemicamente seraacuten aquellos que en cierta medida ayuden a la naturaleza a recuperarse por siacute misma sacando el maacuteximo partido a los pro-cesos ecoloacutegicos que operan en estas circunstancias

Para avanzar en este conocimiento desde hace casi diez antildeos trabajamos con instituciones como el Con-sejo Superior de Investigaciones Cientiacuteficas la Univer-sidad Complutense la Universidad Rey Juan Carlos de Madrid y maacutes recientemente la Fundacioacuten Biodiversi-dad El manual que usted tiene ahora en sus manos re-coge los resultados de investigacioacuten generados por di-versos grupos de investigadores en todos estos antildeos Los avances se han concretado en diversas soluciones teacutecnicas que gestores e ingenieros podraacuten aplicar en futuros proyectos de restauracioacuten ambiental teacutecnica y econoacutemicamente maacutes eficientes que los actuales

En Ferrovial esperamos que este innovador texto contribuya a sentar las bases de lo que los cientiacutefi-cos han dado en llamar ldquorestauracioacuten ecoloacutegicardquo y que en definitiva no es sino actuar con maacutes inte-ligencia y eficiencia aprendiendo de la naturaleza para facilitar la integracioacuten ecoloacutegica de las infraes-tructuras de transporte del futuro

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AGRADEC

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NTO

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que

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pos

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AGRADECIMIENTOS lo que ha hecho posible este libro

Este libro es una labor colectiva en el maacutes amplio sentido No solo por reunir a maacutes de 30 especialistas que han acabado como coautores del mismo sino por conseguir la participacioacuten de representantes de los colectivos maacutes diversos cientiacuteficos profesores estudiantes de doctorado teacutecnicos de la adminis-tracioacuten responsables de empresas de construccioacuten e infraestructuras teacutecnicos en restauracioacuten y pro-duccioacuten forestal autoridades en el mundo de la legislacioacuten ambiental y en planes de seguimiento etc Combinar opiniones informacioacuten y experiencia de autores tan dispares ha sido todo un reto pero tambieacuten un punto de partida en esta aventura de cuya experiencia hemos salido todos enriquecidos Durante el antildeo de gestacioacuten de este libro hemos sufrido numerosos desafiacuteos personales para com-patibilizar este esfuerzo con nuestras obligaciones habituales Por suerte pudimos con todo y creemos con honestidad que el resultado habla por siacute mis-mo Estamos convencidos de que nuestro trabajo marca un hito que sentaraacute precedente al conseguir reunir a los principales agentes implicados en este complejo mundo de la restauracioacuten ecoloacutegica Con-fiamos en que sea una aportacioacuten uacutetil para andar el largo camino que deberiacutean recorrer necesariamente de la mano los diversos agentes econoacutemicos ins-tituciones y expertos implicados en la integracioacuten ambiental de las infraestructuras de transporte y en la restauracioacuten de las aacutereas afectadas por estas La relacioacuten detallada de agradecimientos de una obra asiacute seriacutea muy larga y seguro que siempre incomple-ta recogemos a continuacioacuten los principales hitos y apoyos que hicieron este libro posible y pedimos disculpas por las omisiones en que podamos incurrir

La Fundacioacuten Biodiversidad se brindoacute desde un prin-cipio a correr con los gastos de la impresioacuten del libro dando por tanto ese necesario soporte para cristalizar un proyecto que veniacuteamos acariciando desde haciacutea mucho tiempo El apoyo de Ignacio To-rres y el buen hacer de Raquel Palomeque han sido esenciales en este sentido Queremos manifestar de forma expliacutecita el enorme apoyo de dos grupos de empresas del mundo de la construccioacuten y las infra-estructuras el grupo Ferrovial y el grupo OHL que han alentado la necesidad de que todos los agentes nos reunamos alrededor de una mesa para hacer posible esta obra y que han apoyado las iniciativas cientiacuteficas que han precedido a este libro Dentro de estas se cuentan un buen nuacutemero de proyectos de investigacioacuten como TALMED (Bases ecoloacutegicas para la restauracioacuten de taludes en aacutereas de clima medite-rraacuteneo TALMED REN 2001-2313) proyecto financia-do por el Ministerio de Ciencia y Tecnologiacutea (actual-mente Ministerio de Ciencia e Innovacioacuten) en 2001 y Ferrovial y que sirvioacute de arranque para muchas de las ideas que aquiacute han cristalizado A TALMED le han seguido muchos otros entre los que destacan EX-PERTAL (Bases experimentales para la sostenibilidad ecoloacutegica de los taludes de autopistas) resultado de un convenio entre el CSIC la Universidad Rey Juan Carlos (Madrid) CINTRA y la Fundacioacuten Bio-diversidad durante los antildeos 2006 y 2010 Por su parte OHL ha realizado otros tantos proyectos de investigacioacuten entre los que podemos destacar los ya finalizados como HIDROTAL (Desarrollo de crite-rios y meacutetodos para evaluar el eacutexito de la restaura-cioacuten de taludes mediante hidrosiembra) que contoacute con ayudas del Ministerio de Ciencia e Innovacioacuten

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IacuteNDICE

(PROFIT FIT-050000-2003-36 FIT-310200-2004-101 CIT-310200-2005-100) y del Centro para el Desarrollo Tecnoloacutegico e Industrial (CDTI OHL-04-0391) reali-zado entre 2003 y 2006 o RECOTAL (Restauracioacuten ecoloacutegica de espacios afectados por la construccioacuten de infraestructuras) que tambieacuten contoacute con ayu-das de los citados organismos (PROFIT CIT-310200-2007-24 CDTI IDI-20080334) durante el periodo 2007-2008 Ambos proyectos llegaron a buen puerto gracias a la imprescindible colaboracioacuten de Univer-sidad Complutense de Madrid Maacutes recientemente la red REMEDINAL2 (lsquoRestauracioacuten y conservacioacuten de los ecosistemas madrilentildeos Respuesta frente al cambio globalrsquo S2009AMB-1783) de la Comunidad de Madrid ha permitido maximizar las interacciones

cientiacuteficas entre distintos grupos cientiacuteficos y empre-sas con sede en Madrid favoreciendo las circunstan-cias que han conducido a este libro

El libro se ha beneficiado de la informacioacuten graacutefica disponible por editores y autores Ademaacutes de las numerosas figuras y fotografiacuteas que se han apor-tado para ilustrar las ideas expresadas en el texto el libro ha incorporado una coleccioacuten de las me-jores imaacutegenes del fondo documental de Ferrovial y del grupo de fauna de la Universidad Autoacutenoma de Madrid asiacute como los aportes de autores indi-viduales como Ignacio Mola Joseacute Francisco Martiacuten Duque Marisa Martiacutenez Santiago Soliveres y Pa-blo Garciacutea Palacios

Fernando Valladares Luis Balaguer Ignacio Mola Adriaacuten Escudero y Valentiacuten Alfaya

Restauracioacuten ecoloacutegica e infraestructuras de transporte definiciones problemas y desafiacuteos

Luis Balaguer Fernando Valladares e Ignacio Mola

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I EL CONCEPTO DE RESTAURACIOacuteN ECOLOacuteGICA EN EL CONTEXTO DE LA OBRA CIVIL

1 Teacuterminos y conceptos

En el contexto de la obra civil han proliferado diversos teacuterminos para describir el tratamiento de los espacios afectados por la construccioacuten de infraestructuras El enunciado maacutes difuso es el de ordenacioacuten ecoloacutegica esteacutetica y paisajiacutestica en el que no se identifican obje-tivos sino uacutenicamente el aacutembito de las acciones pro-puestas Esta foacutermula suma a su escasa definicioacuten el caraacutecter fragmentario de la enumeracioacuten de teacuterminos al no conseguir integrar en una sola estrategia discipli-nas que deberiacutean converger en el entorno de la obra civil Maacutes concreto pero igualmente poco comprome-tido es el teacutermino revegetacioacuten entendida como el establecimiento de un tapiz o cubierta vegetal En el otro extremo de ambicioacuten se encontrariacutea el tiacutetulo de numerosos proyectos que comienzan con expresiones como recuperacioacuten del medio natural Recuperacioacuten es un teacutermino engantildeoso porque sugiere la reversibi-lidad de las acciones ejecutadas Lamentablemente el tiempo transcurre en un solo sentido y solo excepcio-nalmente es posible reconstruir o reponer el mosaico de ecosistemas inicial Medio natural es igualmente desafortunado Muchos de los paisajes considerados como paradigmaacuteticos de lsquonaturaleza bien conservadarsquo son el resultado de la interaccioacuten secular o milena-ria del hombre con su entorno encinares castantildeares choperas carrizales praderas etc Es esta interaccioacuten la que confiere singularidad a algunos de los espacios

CAPIacuteTULO 1 Restauracioacuten ecoloacutegica e infraestructuras de transporte definiciones problemas y desafiacuteos

Luis Balaguer Fernando Valladares e Ignacio Mola

naturales protegidos de este territorio Por uacuteltimo es erroacuteneo posicionar al ser humano y a sus actividades al margen de lo lsquonaturalrsquo en el campo de lo lsquoartificialrsquo

De modo general el proyecto para el tratamiento de los espacios afectados por las obras se articu-la en torno a los potenciales impactos ambientales Desde los Reales Decretos 13021986 y 11311988 se establece que los estudios de evaluacioacuten de im-pacto ambiental deben proponer las actuaciones ne-cesarias para evitar reducir o compensar los efectos ambientales negativos significativos Estas acciones reciben el nombre de medidas protectoras (o preven-tivas) correctoras y compensatorias respectivamen-te La Ley 12008 de Evaluacioacuten de Impacto Ambien-tal sumada a sus homoacutelogas autonoacutemicas extiende el dominio de aplicacioacuten de estas definiciones en el aacutembito de las infraestructuras lineales

La Ley 82001 de Carreteras de Andaluciacutea propone dos teacuterminos integracioacuten ambiental y restauracioacuten paisajiacutestica La intencioacuten es establecer una diferen-cia entre la ejecucioacuten de las medidas preventivas y correctoras establecidas en la declaracioacuten de im-pacto ambiental (integracioacuten ambiental) de aquellas otras adicionales que persigan con mayor rigor y detalle la revegetacioacuten del dominio puacuteblico viario y del entorno afectado para su mejor integracioacuten en el paisaje local (restauracioacuten paisajiacutestica)

Es probable que expresiones como recuperacioacuten del medio natural o restauracioacuten paisajiacutestica respondan a una demanda social de conservacioacuten del patrimonio de la biodiversidad y del paisaje pero sobre todo de

mejora de la calidad de vida del usuario y de los resi-dentes en zonas proacuteximas a la infraestructura En esta coyuntura aparece procedente de otro aacutembito una nueva visioacuten la de la restauracioacuten ecoloacutegica

2 Una nueva visioacuten

La restauracioacuten ecoloacutegica entendida como la colabo-racioacuten al desarrollo de un determinado mosaico de co-munidades de organismos con el fin de mejorar la ca-lidad integral de los ecosistemas y su expresioacuten como paisaje constituye una herramienta primordial dentro de los planes de conservacioacuten y gestioacuten de especies y espacios El teacutermino restauracioacuten integra los dos objetivos que persiguen las actuaciones a) orientar el dinamismo espontaacuteneo del sistema hacia un de-terminado mosaico de comunidades de organismos y b) acelerar el proceso que espontaacuteneamente habriacutea tardado en suceder un tiempo maacutes dilatado o no ha-briacutea ocurrido por siacute mismo El epiacuteteto ecoloacutegica hace referencia a los criterios y meacutetodos utilizados por el restaurador El disentildeo de protocolos para la recupera-cioacuten de poblaciones comunidades y haacutebitats supone un reto tanto cientiacutefico como teacutecnico En el aacutembito cientiacutefico el desarrollo de contenidos que sustenten el concepto y la praxis de la restauracioacuten ha generado una nueva siacutentesis de la teoriacutea ecoloacutegica basada en la reflexioacuten sobre la dimensioacuten del impacto antropo-geacutenico en el planeta El intento de reunir las piezas del puzle ensamblarlas y que el conjunto funcione de una determinada forma plantea hipoacutetesis relevantes sobre la ecologiacutea y evolucioacuten de los organismos y sistemas (Figura 1)

Figura 1 La cobertura vegetal de este terrapleacuten generado durante la construccioacuten de una autopista no se debe al eacutexito de la hidrosiembra realizada ya que las especies presentes no estaban incluidas en el coctel de semillas aplicado sino a la germinacioacuten espontaacutenea de espe-cies anuales que alcanzaron este escenario mediante dos posibles viacuteas bien por dispersioacuten natural desde el entorno (matriz) bien al estar incluidas sus semillas en el extendido de tierra vegetal que se realizoacute de forma previa a la ejecucioacuten de la hidrosiembra (Foto Ignacio Mola)

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IacuteNDICE

Las primeras propuestas teacutecnicas implicaban costes ecoloacutegicos y econoacutemicos inaceptables beneficios fugaces o se basaban en concepciones erroacuteneas Estas deficiencias se han visto agravadas por la aplicacioacuten de teacutecnicas y criterios agronoacutemicos in-apropiados en el marco de la restauracioacuten ecoloacutegi-ca La influencia de estos criterios auacuten se manifiesta en numerosos proyectos de obra que persiguen la integracioacuten paisajiacutestica de aacutereas degradadas pero recomiendan el aporte de nutrientes el extendido de una gruesa capa de sustrato feacutertil y la evalua-cioacuten del eacutexito de las siembras atendiendo a valores de cobertura sin que en ninguno de estos casos se contemplen como referente las caracteriacutesticas de la matriz circundante no alterada Los planteamien-tos basados en una filosofiacutea agronoacutemica tienen un espacio restringido pero de enorme intereacutes en el contexto de la restauracioacuten La restauracioacuten de am-plias superficies frecuentemente conlleva el reto de generar mosaicos en los que se integren paisajes agrarios que supongan la disponibilidad de nuevos recursos para las poblaciones humanas afectadas o constituyan por siacute mismos un patrimonio natural por su alta diversidad bioloacutegica o cultural como resultado secular de una interaccioacuten sostenible del hombre con su medio En el aacutembito de la obra civil los protocolos de inspiracioacuten agronoacutemica se han justificado aludiendo a que el objetivo prioritario de la revegetacioacuten es la estabilizacioacuten del sustrato de los taludes generados por la construccioacuten de infraestructuras Por ello se seleccionan y siembran linajes de especies de germinacioacuten y crecimiento raacutepido se abona y se riega Este planteamiento teoacuterico que vincula las praacutecticas de inspiracioacuten agronoacutemica con la estabilidad geoteacutecnica contrasta con la realidad en obra De hecho los taludes se siembran semanas o meses despueacutes de haberse abierto (Figura 2) los dientes de los cazos de las retroexcavadoras abren canales que evolucionan en regueros y caacutercavas y sobre todo la erosioacuten superficial podriacutea paliarse con una red de drenaje adecuada y un acabado maacutes estable

Frente a estos planteamientos agronoacutemicos el cambio cualitativo en el disentildeo de paisajes en el contexto de la restauracioacuten ha sido el compren-der que el objetivo no es reunir una coleccioacuten de

elementos caracteriacutesticos para recrear un paisaje sino operar sobre variables ecoloacutegicas clave de for-ma que se inicie y acelere un proceso espontaacuteneo de cicatrizacioacuten Maacutes que en la recuperacioacuten de la composicioacuten la atencioacuten se debe centrar en la re-paracioacuten de procesos como la hidrologiacutea el ciclo de nutrientes o la captacioacuten de energiacutea El nuevo paradigma de la restauracioacuten basa las estrategias de actuacioacuten en una intervencioacuten miacutenima sobre los procesos autogeacutenicos del sistema Por ello estas actuaciones deben representar un coste econoacutemico reducido y ser efectivas en vastas superficies lo cual es apropiado cuando el objetivo que se persi-gue es el establecimiento de una cubierta vegetal de escaso o nulo mantenimiento soporte de un uso muacuteltiple que pueda incluir desde la conserva-cioacuten de la diversidad bioloacutegica hasta la explotacioacuten agropecuaria y forestal o el turismo

Figura 2 Aspecto de los taludes de un desmonte de la autoviacutea M-12 diacuteas antes de proceder a su hidrosiembra Se observan los canales generados por los dientes de los cazos de las retroexcavadoras que han sido ampliados por erosioacuten generando regueros y pequentildeos desprendimientos (Foto Ignacio Mola)

II EL ENTORNO DE LAS INFRAESTRUCTURAS DE TRANSPORTE

Todas las obras civiles denominadas infraestructuras lineales entre las que destacan las infraestructuras de transporte comparten el hecho de que una de sus dimensiones la longitud predomina sobre las otras dos lo cual tiene estas dos importantes im-plicaciones

1 Generan corredores con su doble accioacuten como conectores y barreras

2 Atraviesan una elevada variedad de medios lo que a su vez conlleva

bull Gran diversidad de normas aplicables (leyes de aguas costas montes conservacioacuten de la naturaleza etc)

bull Numerosas expropiaciones con los consi-guientes cambios de uso

bull Disentildeos complejos dado que deben respon-der a una importante variacioacuten del entorno

El resultado de las obras genera un nuevo escenario en el que la restauracioacuten ecoloacutegica en general y la reve-getacioacuten en particular deben contribuir a resolver tam-bieacuten cuestiones relacionadas con el funcionamiento de la infraestructura En el caso de carreteras por ejem-plo se trata de evitar deslumbramientos y la hipnosis del conductor y la reduccioacuten del peligro marginal

En el caso de las infraestructuras de transporte los condicionantes teacutecnicos obligan a realizar impor-tantes movimientos de tierra (Figura 3) El volumen y destino de dichos movimientos depende de la

diferencia de cota entre la rasante de la viacutea y la topografiacutea y la pendiente de los taludes con que se disentildee la seccioacuten tipo de la infraestructura En caso de que la rasante se encuentre a una cota superior a la del terreno seraacute necesario efectuar un relleno con materiales de aportacioacuten que se denomina terra-pleacuten Por el contrario se denomina desmonte cuan-do es necesario excavar para realizar la explanacioacuten de la infraestructura porque la rasante se situacutea por debajo de la cota del nivel natural del terreno (Figu-ra 4) Las superficies inclinadas que resultan a lo lar-go de un terrapleacuten o de un desmonte se denominan taludes en el primer caso taludes de terrapleacuten y en el segundo caso taludes de desmonte La estrategia a seguir por el responsable de la obra debe ser com-pensar las tierras y asiacute minimizar la necesidad de recurrir a preacutestamos y vertederos Es importante sa-ber que aunque no esteacute incluido en las actividades de restauracioacuten el movimiento de tierras representa un monto en el presupuesto que por lo general es varios oacuterdenes de magnitud superior al de las actuaciones del capiacutetulo de restauracioacuten y su coor-dinacioacuten con estas actividades posteriores permitiriacutea no solo ganar en eficacia sino potenciales ahorros econoacutemicos para la constructora

Ademaacutes de taludes los espacios en los que se ejecu-tan medidas correctoras ambientales en el entorno de la infraestructura incluyen preacutestamos (generados como consecuencia de la extraccioacuten de materiales constructivos) vertederos (en los que se vierten las tierras no compensadas) parques de maquinaria plantas de asfaltado y hormigonado zonas de aco-pios temporales viario de acceso a la obra entre otras aacutereas de instalaciones auxiliares de obra

Figura 3 Vista aeacuterea de las obras de la variante de El Molar en la A-1 Se puede apreciar la magnitud del impacto producido por el movimiento de tierras y la construccioacuten de un viaducto (Foto OHL)

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Figura 4a Esquema de la construccioacuten de una carretera sobre una ladera 1 Seccioacuten de la ladera sobre la que se va a construir una in-fraestructura lineal de transporte terrestre 2 Se superpone el plano de la plataforma de la viacutea y se oscurece la zona de la ladera que se veraacute afectada por el movimiento de tierras 3 Se realiza un desbroce de toda la vegetacioacuten de la zona afectada 4 Se retiran los 30-40 cm superficiales del aacuterea afectada denominada lsquotierra vegetalrsquo que seraacute acopiada por un tiempo variable hasta su posterior extendido sobre los nuevos planos originados tras los movimientos de tierra 5 Esquema en planos trasluacutecidos de los movimientos de tierra necesarios 6 A la izquierda aparece el volumen de tierra que seraacute necesario excavar para el desmonte y a la derecha el volumen de tierra que seraacute necesario acopiar para construir el terrapleacuten La diferencia entre ambos voluacutemenes se denomina balance del movimiento de tierras si es lt0 es decir se necesita acopiar un volumen superior al que se va a excavar la obra es deficitaria en tierra luego necesitaraacute de una can-tera o preacutestamo de donde obtener este volumen necesario de tierra Por el contrario si es gt0 el volumen de tierra excavado es superior al necesario para acopiar la obra es excedentaria en tierra lo que implica la necesidad de un vertedero donde depositar los voluacutemenes sobrantes Si es =0 los movimientos de tierra estaacute equilibradoscompensados es la situacioacuten oacuteptima ya que no seraacute necesario ocupar espacios adicionales 7 Perfil final tras realizar los movimientos de tierra Quedan construidos tanto el desmonte como el terrapleacuten (se colorea en tono maacutes oscuro el terrapleacuten para diferenciarlo respecto al perfil original) 8 Lo habitual es que sobre los terraplenes se realice tras su construccioacuten un extendido de tierra vegetal de 30-40 cm En desmonte a no ser que sean muy tendidos es decir de pendiente muy baja no se realiza este tipo de actividad (Figura Ignacio Mola)

Figura 4b Resultado de la construccioacuten de la carretera sobre una ladera La superficie ocupada por los taludes (de excavacioacuten o desmonte y de acumulacioacuten o terrapleacuten) constituye junto con las medianas bermas zonas interiores de enlaces etc los principales espacios a restaurar y las dianas maacutes importantes de las actuaciones correctoras y de integracioacuten paisajiacutestica de las infraestructuras de transporte (Figura Ignacio Mola)

III IMPACTOS VARIADOS SOBRE LOS ECOSISTEMAS

La creacioacuten de infraestructuras de transporte ge-nera un amplio nuacutemero de impactos sobre los ecosistemas por los que transcurre La ocupacioacuten del suelo los movimientos y compactacioacuten de tie-rras y la generacioacuten de preacutestamos y vertederos ocasionan un impacto directo en la peacuterdida de la cubierta vegetal y de suelo original con todas sus propiedades bioloacutegicas (Figura 5) El traacutensito de vehiacuteculos y sus emisiones sonoras y gaseosas generan otros efectos indirectos maacutes difiacuteciles de cuantificar (Figura 6) A estos se suman impactos esteacuteticos y paisajiacutesticos ademaacutes de aquellos que afectan a la provisioacuten de bienes y servicios eco-sisteacutemicos Los impactos ecoloacutegicos de la cons-truccioacuten explotacioacuten y eventual deconstruccioacuten son por tanto difiacuteciles de valorar y muchos estaacuten apenas comenzando a conocerse

Figura 5 Movimiento de tierras y generacioacuten de taludes durante la construccioacuten de una autopista (Foto Nerea Aizpurua y Adoracioacuten Goacutemez)

Cuneta

Desmonte

Drenajes del desmonte

Mediana

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Figura 6 Emisioacuten de polvo sobre la vegetacioacuten La fase de cons-truccioacuten genera numerosos impactos sobre la flora y la fauna in-cluyendo el polvo la contaminacioacuten atmosfeacuterica y el ruido (Foto Nerea Aizpurua y Adoracioacuten Goacutemez)

Cuando desaparece la cubierta vegetal por causa de los desbroces o del movimiento de tierras la capa de suelo feacutertil se queda sin el efecto protector que le proporcionaban las raiacuteces y el dosel vegetal En los eventos de lluvia que tengan lugar a continuacioacuten el agua de escorrentiacutea arrastraraacute la capa superior maacutes feacutertil y que contiene propaacutegulos y semillas formaacuten-dose surcos y regueros de difiacutecil colonizacioacuten por las plantas El sustrato que queda despueacutes de que se produzcan fenoacutemenos erosivos importantes es muy pobre y muchas veces demasiado duro para que las semillas puedan enraizar Este efecto se produce es-pecialmente en zonas de elevada pendiente como en los desmontes y terraplenes La peacuterdida de suelo y vegetacioacuten a su vez ejerce una influencia direc-ta e indirecta sobre otros organismos dando lugar a ecosistemas simplificados y poco resilientes es decir con baja capacidad de recuperacioacuten despueacutes de ser perturbados Este ciacuterculo vicioso requiere in-tervencioacuten o de lo contrario se pone en peligro la propia estabilidad de las infraestructuras (Figura 7)

Figura 7 Grandes procesos erosivos tras una lluvia intensa en la Autopista de la Costa del Sol (Maacutelaga) (Foto Fernando Valladares)

La construccioacuten de toda infraestructura viaria desde una perspectiva espacial supone la fragmentacioacuten de los haacutebitats es decir la transformacioacuten del terri-torio al resultar subdividido en fragmentos menores y aislados con la consiguiente reduccioacuten de conec-tividad El tamantildeo de estos fragmentos de territorio condiciona en gran medida la dinaacutemica de las po-blaciones naturales y los patrones de distribucioacuten de numerosos organismos entre los que destacan los vertebrados grupo bioloacutegico sobre el que se han centrado diversos estudios (Robinson et al 1992) producieacutendose incluso una reduccioacuten de la riqueza especiacutefica en las teselas de menor superficie favore-ciendo la aparicioacuten de especies introducidas y aque-llas autoacutectonas maacutes comunes en detrimento de las maacutes especializadas y escasas (Bennett 1990 Gilbert et al 1998) Asiacute mismo producto de esta reduccioacuten de la conectividad las poblaciones de vertebrados pueden quedar subdivididas en poblaciones de me-nor tamantildeo y por ello sometidas a un mayor riesgo de extincioacuten puesto que resultan maacutes sensibles a los fenoacutemenos estocaacutesticos e imprevisibles como incendios sequiacuteas o perturbaciones de origen antroacute-pico (Andrews 1990 Forman y Alexander 1998) La fragmentacioacuten de haacutebitats es un proceso que integra muacuteltiples efectos entre los que destacan la peacuterdi-da y reduccioacuten de calidad del haacutebitat el aumento de la mortalidad por atropello y la modificacioacuten de la conectividad del paisaje Proceso que constitu-ye una de las principales amenazas para especies con amplias aacutereas de campeo siendo el lince ibeacuterico (Lynx pardina) un claro ejemplo de ello (Ferreras et al 1992 Iglesias Merchaacuten 2009) y en suma para la biodiversidad en general (Trombulak y Frissell 2000 Forman et al 2003) comprometiendo el equilibro entre el desarrollo socioeconoacutemico y la conservacioacuten de la fauna

Ademaacutes de los impactos generales ya comenta-dos podemos destacar las siguientes considera-ciones

bull La modificacioacuten del relieve original por los movi-mientos de tierra modifica las redes de drenaje y expone grandes superficies susceptibles de ero-sioacuten y por lo tanto capaces de emitir enormes cantidades de sedimentos lo que produce seve-ras modificaciones en las redes hidrograacuteficas del entorno

bull La peacuterdida o alteracioacuten del haacutebitat no se limita a la zona directamente afectada por la infraes-tructura sino que puede afectar a zonas aleja-das maacutes de 200 metros desde el borde de la misma

bull Las infraestructuras lineales pueden actuar como barrera para la dispersioacuten de algunas especies limi-tando su extensioacuten pero tambieacuten facilitan la disper-sioacuten de especies exoacuteticas con caraacutecter invasor

bull Las infraestructuras lineales son efectivas para la propagacioacuten de enfermedades pudiendo oca-sionar impactos importantes en las poblaciones vegetales y animales

bull La dispersioacuten de otras especies no deseables a traveacutes de la infraestructura viaria puede tener a su vez efectos secundarios en las comunidades nativas

bull Los elementos asociados a la infraestructura tales como puentes y tuacuteneles generan corredores fren-te a barreras geograacuteficas (riacuteos mares cordilleras montantildeosas etc) lo que puede dar lugar a la apa-ricioacuten de especies nuevas para la zona con efectos complejos sobre la red de interacciones bioloacutegicas

bull La peacuterdida de la vegetacioacuten de ribera cuando la infraestructura atraviesa riacuteos o zonas lacustres (Figura 8) provoca alteraciones en la dinaacutemica geomorfoloacutegica del cauce afectando a su esta-bilidad y su potencia hidraacuteulica La peacuterdida de la vegetacioacuten de ribera puede afectar a las carac-teriacutesticas fiacutesico-quiacutemicas del agua y a la calidad general del cauce

bull Las sales empleadas para eliminar el hielo en las carreteras y otros productos quiacutemicos que se antildeaden en la fase de explotacioacuten o uso de la infraestructura modifican las propiedades fiacutesico-quiacutemicas del suelo tales como la conductividad y el pH Las plantas se ven muy afectadas por la toxicidad producida por el aumento en las con-centraciones de iones del suelo y la dificultad para captar agua de eacutel Estas modificaciones pue-den favorecer la aparicioacuten de nuevas comunida-des de plantas y animales formadas por especies tolerantes a la sal (comunidades haloacutefilas)

bull El viento que se crea por el paso de los coches o por la apertura de corredores tiene un impacto adicional sobre las comunidades vegetales y ani-males adyacentes

bull Las emisiones de los vehiacuteculos las partiacuteculas pro-cedentes del deterioro de los neumaacuteticos las peacuter-didas de aceite el ruido y otro tipo de molestias pueden extenderse desde el borde de la carretera a una distancia variable produciendo impactos diversos sobre las comunidades naturales

bull El polvo generado por el traacutefico depositado so-bre las hojas puede afectar a los procesos de fotosiacutentesis y transpiracioacuten de las plantas

bull Las actividades asociadas a las carreteras como estaciones de servicio aacutereas de peaje control y mantenimiento etc generan ademaacutes diversos impactos adicionales

Figura 8 Peacuterdida de la vegetacioacuten de ribera por el paso supe-rior de la Autopista R4 Esta peacuterdida provoca a su vez impactos en la estructura y funcionamiento del riacuteo (Foto Nerea Aizpurua y Adoracioacuten Goacutemez)

Todos estos impactos y muchos maacutes de los que auacuten no somos conscientes requieren una actua-cioacuten previa y posterior para evitarlos atenuarlos o corregirlos En la mayoriacutea de los casos el primer objetivo es hacer frente a las nuevas superficies generadas Los taludes son junto con zonas inte-riores de enlaces preacutestamos vertederos y demaacutes zonas no asfaltadas de la plataforma el foco prin-cipal de las actuaciones de restauracioacuten Y el primer paso se da actuando sobre la vegetacioacuten O sobre la falta de ella

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IV REVEGETACIOacuteN DE TALUDES UN PRIMER PASOhellip iquestEN FALSO

En el disentildeo de taludes la revegetacioacuten y la obra civil siguen criterios contrapuestos (principio de in-compatibilidad) Si el establecimiento de una cubier-ta vegetal requiere sustratos francos que faciliten la progresioacuten subterraacutenea del vegetal la estabilidad estructural de la obra exige que los taludes de te-rrapleacuten se encuentren altamente compactados Por ello los terraplenes se construyen mediante suce-sivas tongadas de unos 30 cm de potencia y los desmontes sufren un refino mediante ripado o vola-duras en liacuteneas con retardadores La acusada dismi-nucioacuten de la porosidad del suelo da lugar a una su-perficie impenetrable de escasa permeabilidad que alcanza temperaturas maacutes elevadas que el entorno para el desarrollo de la microflora y fauna edaacutefica La disparidad de criterios se repite en relacioacuten con el contenido del sustrato en materia orgaacutenica Su valor como fuente de nutrientes y sobre todo su capacidad de retencioacuten hiacutedrica favorece el desarrollo vegetal al tiempo que compromete la estabilidad de los taludes

La solucioacuten habitual a este conflicto implica un compromiso entre los objetivos de la restaura-cioacuten y la obra civil que se traduce en la reali-zacioacuten de labores someras destinadas a facilitar la germinacioacuten y el enraizamiento inicial Estas medidas consisten en el extendido de tierra ve-getal cuya potencia oscila entre 15 y 30 cm o en el uso de mulches o acolchados definidos como recubrimientos permeables de materiales orgaacuteni-cos naturales o sinteacuteticos biodegradables que favorecen la retencioacuten de agua y reducen el ries-go de erosioacuten

El eacutexito de estas labores posteriores depende de variables clave entre las que destacan

1 La pendiente Cuanto maacutes vertical es un talud mayor dificultad ofrece para la revegetacioacuten y mayores son los costes La pendiente es un cociente entre la diferencia de cota (v) y la pro-yeccioacuten horizontal de la distancia recorrida (h) en este caso por un talud Los proyectos de obra suelen determinar una inclinacioacuten para te-rraplenes de 2h1v y para los desmontes maacutes tendidos de 3h2v referidos asiacute tradicional-mente por aplicacioacuten del sistema acotado o de planos acotados al trazado de las infraes-tructuras Por encima de este uacuteltimo valor no

se realizan aportes de tierra vegetal De hecho a medida que la inclinacioacuten se aproxima a este umbral se agrava el riesgo de inestabilidad que en caso de manifestarse no solo cancela el efecto benefactor de estos aportes sobre la cubierta sino que resultariacutea en costosos ate-rramientos de las cunetas Este riesgo se incre-menta a medida que aumenta la potencia de la capa extendida y la longitud de los taludes Para pendientes iguales o superiores a 11 los proyectos de obra no suelen proponer medidas restauradoras

La inclinacioacuten interacciona con variables ambien-tales relevantes como la interceptacioacuten de ra-diacioacuten solar la temperatura y la disponibilidad hiacutedrica Estas interacciones dependen tambieacuten de la orientacioacuten de los taludes Asiacute en taludes orientados a solana una mayor inclinacioacuten deter-mina una mayor exposicioacuten a la radiacioacuten mien-tras que en umbriacutea el incremento de la pendiente tiene el efecto contrario

2 Calidad de la tierra vegetal Es probablemente el factor maacutes determinante del eacutexito de las actuaciones Su accioacuten es muacuteltiple fertilidad por su contenido en materia orgaacutenica y nu-trientes aporte del banco de semilla y de sim-biontes (hongos micorrizoacutegenos y bacterias fijadoras de nitroacutegeno) penetrabilidad gracias a su efecto sobre la textura higroscopicidad y pH En aquellos taludes en los que no se extiende por ahorrar costes por tratarse de desmontes o por su excesiva pendiente la re-vegetacioacuten es notablemente maacutes lenta y en ocasiones infructuosa El acopio de la tierra vegetal durante los movimientos de tierras ge-nerados durante la fase de construccioacuten de la infraestructura es un aspecto delicado que afecta a la utilidad y valor para la restauracioacuten de la tierra vegetal (Figura 9)

3 Carestiacutea de nutrientes Se intenta resolver a corto plazo mediante el uso de fertilizantes solubles y en un creciente nuacutemero de ocasiones con abonos de liberacioacuten lenta Sin embargo el aporte es con frecuencia insuficiente y resulta determinante el contenido en nutrientes del extendido de tierra vegetal que a su vez favorece su retencioacuten y su uso gradual por la vegetacioacuten

Figura 9 La denominada en obra ldquotierra vegetalrdquo se corresponde con los primeros 30-40 cm del suelo que se retira de todas las superficies que se veraacuten afectadas por movimientos de tierra En esta capa estaacuten importantes nutrientes y sobre todo numerosas semillas que permitiraacuten la regeneracioacuten de la cubierta vegetal El almacenamiento de la tierra vegetal es criacutetico no puede mantenerse mucho tiempo porque se pierde la viabilidad de muchas semillas Tambieacuten es criacutetico el efecto dilucioacuten del banco de semillas al mezclarse con otros sustratos o suelos sin semillas o al decantarse (Figura Ignacio Mola)

4 Interaccioacuten con la obra civil Las principales fuen-tes de conflicto son

bull Realizacioacuten de siembras y plantaciones fuera de eacutepoca como consecuencia de las exigencias del plan de obra Dado que el proyecto suele exigir dos antildeos de garantiacutea el contratista se encuentra con un mayor volumen de marras a reponer Este hecho puede encarecer el presupuesto de revege-tacioacuten hasta en un 50

bull Retraso de las siembras En este caso al igual que si lloviera torrencialmente antes de que se cumplieran 15 diacuteas tras la diseminacioacuten de las semillas es de esperar que se disparen fenoacutemenos erosivos y de inestabilidad de

taludes Es notable que maacutes del 10 de las siembras suele repetirse

bull Efectos negativos derivados de la simultanei-dad entre obra civil y restauracioacuten caiacuteda de escombros paso de maquinaria etc

bull Perfilado o refino de taludes con posterioridad a la ejecucioacuten de siembras y plantaciones o al esta-blecimiento espontaacuteneo de una cubierta vegetal

bull Vertido de los materiales procedentes de la lim-pieza de cunetas sobre los taludes sembrados plantados o cubiertos por vegetacioacuten espontaacutenea

bull Instalacioacuten de pasarelas drenajes o medios auxiliares en taludes revegetados previamente

3-5 cm banco desemillas viable

30 cm retiradoscomo tierra vegetal

La tierra vegetal retirada se acopla durante un periodo

de tiempo variable El banco de semillas se diluye por 10

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5 Deficiencias en la ejecucioacuten de los trabajos Las labores de revegetacioacuten de los taludes se realizan en el tramo final del periodo de ejecucioacuten de la infraestructura El balance econoacutemico adverso la multiplicidad de subcontratas la inmediatez de la fecha de entrega la exigencia de un acabado pa-tentemente verde en la inauguracioacuten son causas frecuentes de errores y efectos no deseados

Figura 10 La hidrosiembra es una teacutecnica habitual para sembrar semillas en amplias superficies como los taludes que se generan al crear viacuteas de transporte La hidrosembradora consiste en un vehiacutecu-lo equipado con un tanque o cisterna en cuyo interior se mantiene en el coacutectel en permanente agitacioacuten para asegurar una mezcla homogeacutenea Los modelos de mayores dimensiones como el que aparece en la imagen cuentan con una torreta en la parte superior desde la cual proyectar con una manguera la siembra (Foto Mariacutea Altamirano OHL)

6 Conflicto de intereses entre objetivos propuestos del proyecto de restauracioacuten En la mayoriacutea de los proyectos se proponen como objetivos indepen-dientes la atenuacioacuten de los impactos ambientales y el acondicionamiento esteacutetico En consecuencia se plantean para estos objetivos medidas correcto-ras independientes cuando en la praacutectica interac-cionan Asiacute es frecuente encontrar que las especies ornamentales elegidas para las plantaciones linea-les en las maacutergenes de la viacutea son especies exoacuteticas con un reconocido caraacutecter invasor De esta forma se da la paradoja de que sobre la superficie del ta-lud se valora positivamente la inclusioacuten de especies autoacutectonas aportadas en el coacutectel de hidrosiembra o con las plantaciones y sin embargo en medianas o a pie de talud se favorece a las especies aloacutectonas capaces de propagarse con facilidad y transformar el medio dificultando el ingreso de ejemplares au-toacutectonos o incluso alcanzando espacios naturales en los que su establecimiento puede causar graves dantildeos ambientales

En resumen la revegetacioacuten de taludes es un pri-mer paso habitual en la restauracioacuten de aacutereas afectadas por infraestructuras de transporte pero su ejecucioacuten se apoya frecuentemente en criterios agronoacutemicos y no ecoloacutegicos Ademaacutes colisiona con numerosos aspectos teacutecnicos y praacutecticos re-lativos a la planificacioacuten construccioacuten y funciona-miento de las infraestructuras

V EL SALTO DE LA PRAacuteCTICA ACTUAL A LA APLICACIOacuteN DE LOS PRINCIPIOS DE LA RESTAURACIOacuteN ECOLOacuteGICA

El procedimiento habitual para la revegetacioacuten de taludes y en general para corregir los impactos ge-nerados por la construccioacuten de las infraestructuras de transporte dista significativamente del que ca-briacutea seguir en el caso de que se aplicaran los prin-cipios fundamentales de la restauracioacuten ecoloacutegica En la actualidad los proyectos de obra civil utilizan el establecimiento de cubiertas vegetales como ele-mento constructivo para dotar de estabilidad geo-teacutecnica a los taludes generados como resultado de los movimientos de tierra El ser humano lleva maacutes de 9000 antildeos ejecutando movimientos de tierras con fines constructivos (c 9700 en Tell Abu Hureyra Siria) Las teacutecnicas (siembras y plantaciones) y los elementos (variedades de cultivo fertilizantes etc) necesarios para establecer una cubierta vegetal se remontan auacuten maacutes en el tiempo (c 10500 antildeos en

el Creciente Feacutertil) La adaptacioacuten de los principios y teacutecnicas de cultivo a los fines de la obra civil ha sido un largo proceso que en las uacuteltimas deacutecadas ha dado lugar a teacutecnicas tan especiacuteficas como la hidrosiembra (Figura 10) Su desarrollo ha originado maquinaria especiacutefica (hidrosembradoras) y coacutecteles de siembra complejos (mezclas comerciales de se-millas abonos solubles y de liberacioacuten lenta co-poliacutemeros colorantes mulches estabilizantes) que permiten el establecimiento de una cubierta vegetal eficaz contra la erosioacuten en un plazo inferior a un mes aun en superficies de elevada pendiente o di-fiacutecil accesibilidad

Desde finales del siglo pasado los proyectos de obra civil han incorporado la reconstruccioacuten del medio na-tural entre los objetivos perseguidos Dependiendo

del rigor del proyecto esta meta puede confundir-se con la integracioacuten esteacutetica en el paisaje local o puede ambicionar la restauracioacuten de un mosaico de ecosistemas en consonancia con las condiciones del entorno En este segundo caso no se trata de adecuar las teacutecnicas convencionales para obtener un beneficio antildeadido sino que se estaacute planteando un salto cualitativo para el que se requiere una base conceptual diferente aunque no opuesta

Frente a los meacutetodos habituales los principios baacutesi-cos que deberiacutean inspirar los nuevos protocolos son extraordinariamente recientes El concepto de pai-saje como ente singular no como marco tiene me-nos de 500 antildeos el concepto de comunidad vegetal menos de 200 el de evolucioacuten menos de 150 el de sucesioacuten ecoloacutegica menos de 90 A partir de los antildeos ochenta del siglo xx la demanda de instrumentos que permitieran ralentizar la tasa de extincioacuten de es-pecies y recuperar sus haacutebitats condujo a la revisioacuten de las bases fundamentales de la ecologiacutea Aparece con ello una nueva siacutentesis denominada ecologiacutea de la restauracioacuten En el marco de la obra civil la re-visioacuten de los criterios desde esta nueva perspectiva supone pasar de los planteamientos agronoacutemicos a los ecoloacutegicos lo cual se concreta en desplazar el centro de atencioacuten desde los elementos hacia el sistema Esta afirmacioacuten que puede parecer teoacuterica permite distinguir entre aquellos protocolos que a lo sumo favorecen la estabilidad y aquellos otros dise-ntildeados para ademaacutes orientar y catalizar la reconstruc-cioacuten de ecosistemas Aquellos autores de proyectos jefes y directores de obra auditores ambientales responsables de programas de vigilancia ambien-tal teacutecnicos ambientales que cifran la calidad en la seleccioacuten de especies son herederos del plantea-miento agronoacutemico tradicional son especialistas en elementos Esta perspectiva todaviacutea inspira la mayor parte de los proyectos de obra en la actualidad Asiacute se recomienda el aporte de nutrientes el extendido de una gruesa capa de tierra vegetal y la evaluacioacuten del eacutexito de las siembras atendiendo a valores de co-bertura con independencia de las caracteriacutesticas de la matriz circundante no alterada Desde la perspectiva agronoacutemica se ha realizado un esfuerzo por revalori-zar los protocolos convencionales introduciendo nue-vos elementos Asiacute las mezclas de hidrosiembra se enriquecen antildeadiendo un porcentaje de semillas de especies autoacutectonas Estas propuestas adolecen sin embargo de una visioacuten sisteacutemica de la restauracioacuten

En contraste desde una perspectiva centrada en el sistema la calidad de las propuestas y resultados se deberaacute basar en la restitucioacuten de los procesos ecoloacutegicos clave Seguacuten la Sociedad Internacional

para la Restauracioacuten Ecoloacutegica el objetivo es asistir la evolucioacuten del espacio degradado Este eacutenfasis en los procesos es crucial cuando se trata de restaurar ambientes severamente alterados (Whisenant 1999) tales como desmontes o terraplenes de infraestruc-turas lineales Se debe prestar un menor intereacutes a la estructura del ecosistema a recrear (disponibi-lidad de nutrientes y agua presencia de especies dominantes) para dedicar una mayor atencioacuten a los procesos que regulan los flujos de los recursos limi-tantes dentro y a traveacutes de las ceacutelulas del paisaje a recuperar

Los procesos clave son

1 La estabilidad y el control de la erosioacuten

2 La hidrologiacutea

3 El ciclo de los nutrientes

4 La captura y transferencia de la energiacutea

Administraciones ingenieriacuteas y constructoras ten-draacuten que optar ante la dicotomiacutea existente entre mantener los protocolos convencionales ligeramen-te mejorados con por ejemplo la incorporacioacuten de semillas de especies autoacutectonas o con aportes de tierra vegetal de potencia mayor y revisar dichos protocolos desde la oacuteptica de la restauracioacuten ecoloacute-gica esto es de la restitucioacuten de procesos

El principal escollo en el disentildeo de nuevos proto-colos desde la perspectiva de la ecologiacutea de la res-tauracioacuten reside en que se conoce muy poco sobre el funcionamiento de los procesos clave en los talu-des Las comunidades vegetales que se establecen de forma espontaacutenea en los taludes de carretera di-fieren en contra de lo esperado de las catalogadas como lsquocomunidades ruderales o de bordes de cami-nosrsquo Algunos cientiacuteficos han propuesto que aque-llos ecosistemas que presentan una composicioacuten de especies con abundancias relativas que no se ha-biacutean encontrado previamente en un amplio territorio de clima homogeacuteneo sean denominados ecosiste-mas emergentes (Hobbs et al 2006) Ejemplos de ecosistemas emergentes son los bosques tropicales lluviosos sabanizados por la apertura de viacuteas de co-municacioacuten las granjas abandonadas de moluscos y crustaacuteceos en manglares y los matorrales mediterraacute-neos alterados por la contaminacioacuten atmosfeacuterica la invasioacuten de especies exoacuteticas y el sobrepastoreo La novedad de todos estos ecosistemas introduce un elevado grado de incertidumbre sobre cuaacutel deberiacutea ser el ecosistema de referencia que permita orientar

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el horizonte de las actuaciones de restauracioacuten Si las comunidades de desmontes y terraplenes forman parte de ecosistemas emergentes y no pueden iden-tificarse con ninguna de las etapas de las series de vegetacioacuten descritas las comunidades maduras que

habitan en las laderas dejan de ser una referencia vaacutelida De ser este el caso es auacuten maacutes acuciante centrar las actuaciones en la restitucioacuten de procesos maacutes que en aproximar la composicioacuten floriacutestica a la de una determinada comunidad diana

VI SIETE RAZONES PARA LA RESTAURACIOacuteN ECOLOacuteGICA DE AacuteREAS AFECTADAS POR INFRAESTRUCTURAS DE TRANSPORTE

Razoacuten 1 por su extensioacuten

Seguacuten el Anuario 2009 publicado por el Ministerio de Fomento se calcula que la densidad de carreteras en Espantildea es de 0328 kmkm2 (Figura 11 y Tabla 1) Este dato permite estimar la superficie total que ocupan las superficies a restaurar de carreteras en el Estado Analizando los distintos tipos de viacuteas la estimacioacuten asciende a unos 5000 km2 Este valor es notablemente

superior al de otros escenarios en los que desde los antildeos setenta se exige la ejecucioacuten integral de un plan de restauracioacuten como es el caso de las escombreras generadas como consecuencia de actividades extracti-vas Asiacute la superficie estimada ocupada por estos es-cenarios equivale a maacutes de 250 veces la superficie to-tal de la escombrera de la corta de carboacuten de Puentes de Garciacutea Rodriacuteguez en La Coruntildea (800 ha) probable-mente la de mayores dimensiones del Estado espantildeol

Figura 11 Dos indicadores de la red de carreteras espantildeola para las diferentes comunidades autoacutenomas kiloacutemetros de red por kiloacutemetro cuadrado (barras en color gris) y kiloacutemetros de red por cada mil habitantes (barras en color amarillo) Tomado del Anuario estadiacutestico 2009 Ministerio de Fomento

En el aacutembito de la conservacioacuten de la biodiversi-dad esa estimacioacuten de la superficie ocupada por las superficies de carretera a restaurar equivale a 10 veces la extensioacuten de un parque nacional tan emble-maacutetico como Dontildeana (50720 ha) Parece a nuestro juicio una negligencia el limitar el tratamiento de una superficie tan extensa a soluciones estaacutendares alejadas de los rigurosos criterios de la restauracioacuten ecoloacutegica como herramienta para la conservacioacuten

de la diversidad bioloacutegica Hasta el presente estos criterios se han aplicado en todo caso a la inte-gracioacuten paisajiacutestica de espacios generados tras la eliminacioacuten de infraestructuras abandonadas Las razones expuestas maacutes abajo en lo referente a su geometriacutea singularidad e integracioacuten en el funcio-namiento ecoloacutegico del mosaico de ecosistemas jus-tifican a nuestro juicio que se reconsidere y revise esta praacutectica

Tabla 1 Red de carreteras del Estado Comunidades Autoacutenomas y Diputaciones y Cabildos seguacuten su tipologiacutea()

ANtildeOSRED

NACIONAL TOTAL

TOTALVIacuteAS DE GRAN

CAPACIDAD

AUTOPISTAS DE PEAJE

AUTOVIacuteASCARRETERAS DE DOBLE CALZADA

RESTO DE LA RED

OTRAS CARRETERAS

1970 139212 203 82 121 - 139009 -

1980 149576 1933 1530 403 - 147643 -

1985(1) 153253 2925 1798 498 629 150328 168470

1990 156243 5624 1887 2806 931 150619 168470

1994(2) 162169 7748 2023 4474 1251 154448 168470

2000 163557 10443 2202 6847 1394 153114 168470

2008(2) 165008 15105 2997 10521 1587 149903 168470

2009(p) 165463 15621 3016 11005 1599 149843 168470

Datos obtenidos del Anuario Estadiacutestico 2009 Ministerio de Fomento Fuente DG de Carreteras (Ministerio de Fomento) comunidades autoacutenomas y diputaciones () Ademaacutes de este viario los ayuntamientos (dato 1998) tiene 489698 km de los cuales 361517 km son interurbanos y ademaacutes existen 11355 (dato 1998) de viario de otros organismos (1) A partir de 1985 aparece la tipologiacutea de carreteras de doble calzada y se hacen homogeacuteneas las series teniendo en cuenta esta clase de carreteras Ademaacutes se incluyen otras carreteras o caminos vecinales a cargo de los ayuntamientos ICONA IRYDA Ministerio de De-fensa organismos autoacutenomos y otros organismos (2) Se elabora en este antildeo un nuevo inventario en la red de carreteras del Estado (p) Datos provisionales

Razoacuten 2 por su geometriacutea

A pesar de su vasta extensioacuten el aprovechamiento po-tencial de este espacio viene draacutesticamente condicio-nado por su geometriacutea en estrechas franjas a ambos lados de la viacutea El desarrollo de la Ecologiacutea del Paisaje en su acepcioacuten anglosajona (Forman y Godron 1986) y del anaacutelisis de las repercusiones de la fragmentacioacuten de haacutebitats evidencia las limitaciones de la geometriacutea de los taludes de carretera para acoger ecosistemas maduros o complejos dado que se trata de espacios marginales sometidos a un intenso efecto borde En

este contexto el efecto borde se define como la per-meabilidad a los impactos causados por la proximidad de la viacutea La penetracioacuten de este efecto es diferente para cada especie y para cada haacutebitat (Tabla 2) Este fenoacutemeno debe reflejarse tanto en las propuestas de restauracioacuten ecoloacutegica como en el espacio disponible para su ejecucioacuten La normativa deslinda desde la Ley 251988 de Carreteras y Caminos tres zonas anidadas de influencia de la viacutea la de dominio puacuteblico de ser-vidumbre y de afeccioacuten En autopistas autoviacuteas y viacuteas raacutepidas la zona de dominio puacuteblico se extiende hasta 8 m desde la arista exterior de la explanacioacuten (es decir

Indicadores km de redkm2 y km de redmil habitantes

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Km de red1000 habitantes

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desde la interseccioacuten del talud con el terreno original adyacente) La zona de servidumbre se extiende 25 m desde el mismo eje y la de afeccioacuten alcanza los 100 m La Ley andaluza 82001 probablemente la norma de carreteras maacutes avanzada en materia ambiental delimi-ta el espacio en el que deben ejecutarse las medidas y proyectos de integracioacuten ambiental y restauracioacuten pai-sajiacutestica Asiacute dentro de la zona de servidumbre legal el uso de los terrenos por sus propietarios o titulares estaacuten supeditados a su compatibilidad con la integra-cioacuten ambiental y paisajiacutestica de la carretera Asimismo las medidas de integracioacuten ambiental o restauracioacuten del paisaje podraacuten ocupar las zonas de afeccioacuten que incluso podraacuten ampliarse maacutes allaacute de los 100 m desde

la explanacioacuten si existen razones ambientales que lo justifiquen a juicio de la Administracioacuten

En conclusioacuten los taludes son espacios afectados por la existencia y funcionamiento de la viacutea pero la publicacioacuten de normas tan avanzadas como la andaluza permite disentildear y ejecutar protocolos de restauracioacuten ecoloacutegica en un espacio que no solo no se circunscribe al de la explanacioacuten sino que puede ocupar toda la superficie que se considere oportuna por su vinculacioacuten desde un punto de vista ecoloacutegico lo cual abre la puerta a que se pueda proyectar algo maacutes ambicioso que el simple maquillaje verde

mediterraacuteneo (Figura 12) Cabe destacar que tambieacuten hay una importante representacioacuten de especies exoacute-ticas (introducidas procedentes de otros territorios aloacutectonas) e incluso un 3 de endemismos

Elemento aloacutectono

Elemento cosmopolita y subcosmopolita

Elemento eurosiberiano-atlaacutentico-mediterraacuteneo

Elemento endeacutemico ibeacuterico

Elemento mediterraacuteneo

Figura 12 Representacioacuten graacutefica del porcentaje de taxones perte-neciente a cada uno de los distintos elementos coroloacutegicos identifi-cados en la flora de los taludes madrilentildeos Fuente Loacutepez Jimeacutenez N 2004 VII Congreso Nacional de Medio Ambiente

Algunas de las comunidades vegetales descritas o reconocidas en taludes de carretera tambieacuten se en-cuentran en otras localizaciones taludes artificiales creados en la construccioacuten de otras infraestructuras o edificaciones paisajes agriacutecolas espacios natura-les protegidos Sin embargo tambieacuten se han descrito comunidades vegetales que alcanzan su mayor rique-za y complejidad en taludes de carretera y rara vez se encuentran en otros enclaves (Schaffers y Sy cora 2002) La singularidad de las comunidades vegetales en estos enclaves viene dada por tres contingentes

Figura 13 En la obra Las amapolas de Claude Monet (1873) ya se aprecia una mayor frecuencia de estas plantas en el terrapleacuten que en los campos de labor

Especies exoacuteticas La frecuencia de estas especies en las comunidades de taludes de carretera es ma-yor que en otras formaciones comparables alejadas de la viacutea (Hansen y Clevenger 2005)

1 Especies nativas arvenses y de pastizales El aban-dono de las teacutecnicas tradicionales de cultivo y de ganaderiacutea extensiva el uso de herbicidas la peacuterdida de tierras agriacutecolas son las causas prin-cipales de la desaparicioacuten progresiva de especies arvenses ruderales y de pastizales que hasta hace poco tiempo eran muy comunes (Figura 13) Los taludes de carreteras pueden actuar como refugio (Tikka et al 2000) e incluso como corredores que favorezcan su propagacioacuten y contribuyan a reducir su riesgo de extincioacuten (Tikka et al 2001)

2 Especies que toleran el reacutegimen de perturbaciones En cualquier ecosistema la presencia de un deter-minado mosaico de comunidades de organismos viene determinado por el reacutegimen de perturbacio-nes (fuegos inundaciones etc) En los taludes de carretera ese reacutegimen viene definido por las ope-raciones de mantenimiento de la viacutea (vertido de tierras procedentes de la limpieza de cunetas sie-gas podas etc) En consecuencia las operaciones de mantenimiento determinan tanto la vegetacioacuten como la fauna de los taludes Asiacute entre las espe-cies lentildeosas las operaciones de limpieza mecaacutenica (gradeo o fresado) parecen estar seleccionando a las especies rebrotadoras frente a las que carecen de esta cualidad (Spooner 2005) Es sabido que las labores de siega alteran la frecuencia con la que aparecen en estos medios distintos mamiacuteferos de pequentildeo porte (Meunier et al 1999)

Este efecto modelador de las operaciones de manteni-miento podriacutea aprovecharse con el fin de potenciar el papel de los taludes como refugio y corredor para el desplazamiento de especies vegetales e incluso como sumidero de las emisiones de dioacutexido de carbono

3 Especies nativas en entornos transformados La agricultura intensiva y la urbanizacioacuten han relega-do a la flora espontaacutenea local a los taludes de carretera convirtieacutendose estos en la mejor repre-sentacioacuten de las especies y comunidades autoacutecto-nas cuando no en el uacuteltimo reducto (Figura 14) La conservacioacuten de las franjas de vegetacioacuten nativa en las maacutergenes de las viacuteas de transporte se ha reclamado incluso en marcos tan emblemaacuteticos como la Amazoniacutea brasilentildea territorio en el que la subvencioacuten de la expansioacuten de las tierras agriacutecolas ha conducido a que se pongan en cultivo incluso los taludes de carretera (Allen 1997)

Tabla 2 Efectos de la penetracioacuten de efecto de borde de las carreteras asfaltadas en diferentes grupos de mamiacuteferos y aves

GRUPO HAacuteBITAT ALCANCE DEL EFECTO (M)

Ungulados Bosque 90-200

Osos Bosque 2500 (con traacutefico)

Osos Bosque 740 (sin traacutefico)

Linces Bosque 100

Lobos Bosque 2000

Insectiacutevoros Bosque 800

Limiacutecolas Prados 2000 (traacutefico denso)

Limiacutecolas Prados 625 (poco traacutefico)

Varias especies de aves Prados 810

Varias especies de aves Bosque 100-680

Varias especies de aves Cultivos 300

Fuente Elaborado a partir de Delgado JD 2003

Razoacuten 3 por su singularidad

En botaacutenica se ha acuntildeado el teacutermino de vegetacioacuten ruderal o viaria para reunir a aquellas comunidades vegetales propias de bordes de caminos sometidas a constantes perturbaciones entre ellas el pisoteo de los transeuacutentes Se trata de comunidades forma-das por especies cosmopolitas es decir de amplia distribucioacuten en el planeta Sin embargo no es este el perfil de la flora que se encuentra en los taludes

de carretera En un territorio floriacutesticamente pobre como el Reino Unido el 435 de las especies apa-recen representadas en los taludes (Way 1977) En la Comunidad de Madrid caracterizada por una ele-vada riqueza de especies vegetales un estudio de-tallado de la flora de los taludes (Loacutepez Jimeacutenez et al 2004) observaba que nada menos que el 14 de los taxones de este territorio aparece represen-tado en ellos es decir 385 de 2684 siendo el con-tingente maacutes numeroso no el cosmopolita sino el

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IacuteNDICE

ESPECIES INVASORAS

Debido a la severidad de las alteraciones los es-pacios afectados por movimientos de tierras son susceptibles de ser colonizados por especies in-vasoras Se muestran seis ejemplos de especies catalogadas como invasoras (Sanz Elorza et al 2004) que han sido detectadas en taludes de ca-rretera De izquierda a derecha y de arriba abajo coniza del Canadaacute (Conyza canadensis) hierba del asno (Oenothera glazioviana) aacuterbol del cielo

(Ailanthus altissima) aquilea amarilla (Achillea fi-lipendulina) amapola de California (Eschscholzia californica) y chumbera (Opuntia maxima) Autor Ignacio Mola

Sanz Elorza M Dana Saacutenchez ED amp Sobrino Ves-perinas E eds 2004 Atlas de las Plantas Aloacutectonas Invasoras en Espantildea Direccioacuten General para la Bio-diversidad Madrid 384 pp

GEacuteNERO CENTAUREA

Las centauras son un geacutenero de plantas (Cen-taurea) que bien sirven de ejemplo de la elevada diversidad floriacutestica existente en los taludes de carretera Se muestran en la laacutemina seis ejem-plos de especies de este geacutenero que se pueden encontrar en estos medios en diferentes puntos

de la Peniacutensula Ibeacuterica De izquierda a derecha y de arriba abajo centaura (Centaurea seridis) rompe piedras (C aspera) abrepuntildeos (C calci-trapa) garbanzos del cura (C alba) clavel de San Juan (C cyanus) y arzolla (C ornata) Autor Ignacio Mola

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Figura 14 En vastas extensiones del Estado australiano de Victoria la vegetacioacuten espontaacutenea autoacutectona solo se conserva en las riberas de los riacuteos y en los taludes de infraestructuras lineales como consecuencia de la ocupacioacuten del territorio por la agricultura En la imagen puede apreciarse la banda de vegetacioacuten espontaacutenea en las maacutergenes de la carretera en una matriz de campos arados

Razoacuten 4 por su interaccioacuten con el entorno

La interaccioacuten ecoloacutegica de los taludes de las viacuteas de transporte con su entorno inmediato deriva de su condicioacuten de corredores Es decir por su geometriacutea canalizan flujos longitudinales y constituyen barreras para flujos transversales Sus dimensiones ademaacutes les fuerzan a atravesar una amplia representacioacuten de ecosistemas Si bien todas las interacciones son po-tencialmente relevantes es evidente que estos efec-tos son particularmente notables cuando el trazado de la viacutea atraviesa espacios naturales de intereacutes o particularmente sensibles

1 Conectividad La conectividad de las viacuteas de co-municacioacuten con su entorno tiene dos importan-tes efectos que son antagoacutenicos y ocurren de forma simultaacutenea el efecto barrera y el efecto conector

Efecto barrera Las viacuteas de comunicacioacuten como ba-rreras fragmentan poblaciones tanto de animales como de vegetales La construccioacuten de pasos de fauna pretende evitar la irrupcioacuten de animales en las calzadas y facilitar el que puedan franquear el obstaacuteculo que representa la viacutea La restauracioacuten ecoloacutegica en el entorno de la viacutea puede contribuir

a mejorar la eficiencia de estos pasos El concurso de la restauracioacuten ecoloacutegica es especialmente re-levante en el caso de los grandes pasos superio-res con tipologiacutea constructiva de falso tuacutenel desti-nados a ungulados y carniacutevoros conocidos como ecoductos o conectores de paisaje La eficiencia de estos ecoductos depende ademaacutes de sus di-mensiones y ubicacioacuten del eacutexito en la ocultacioacuten de la viacutea y en la recreacioacuten del paisaje a lo largo del recorrido de estos pasos de fauna

Frente a este efecto barrera negativo los talu-des de carretera podriacutean ejercer un efecto ba-rrera positivo cuando el objetivo es apantallar las emisiones procedentes del traacutefico rodado Fundamentalmente ruidos y contaminantes En el caso de los ruidos es sabido que la eficacia como aislante acuacutestico de una cubierta vegetal de reducido porte es muy deficiente Sin embar-go puede desempentildear un papel relevante como filtro de partiacuteculas de emisiones de gases con-taminantes como oacutexidos de nitroacutegeno e incluso como sumidero de dioacutexido de carbono (Forman et al 2003) La capacidad de la actividad vegetal en el entorno de la viacutea como sumidero de CO

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depende del aprovechamiento que se le deacute a los restos vegetales cosechados

Efecto conector Los taludes tambieacuten pueden funcionar como conectores contribuyendo a aminorar los efectos de la fragmentacioacuten de haacute-bitats y poblaciones Con frecuencia se ha asu-mido que las maacutergenes de carretera mantienen poblaciones de especies vegetales forestales solo como consecuencia de la colonizacioacuten rei-terada de individuos procedentes de fragmentos de bosque conservados en el entorno sin que puedan completarse los ciclos vitales de estas especies en los taludes debido al marcado efec-to borde y al draacutestico reacutegimen de perturbacio-nes en este medio Sin embargo algunos auto-res sostienen que los taludes pueden funcionar como haacutebitats estables e incluso como corredo-res que permitan conectar fragmentos alejados de formaciones vegetales aisladas en el seno de matrices transformadas por la agricultura y la urbanizacioacuten (Deckers et al 2005) Pequentildeos nuacutecleos poblacionales de especies vegetales amenazadas podriacutean actuar como conectores a modo de lsquocadena de trampolinesrsquo (conocidos en ingleacutes como stepping stones) que propicia-ran la propagacioacuten de frutos semillas polen esporas polinizadores dispersores de frutos manteniendo la funcionalidad del conjunto de fragmentos es decir de la metapoblacioacuten El hecho de que los taludes pudieran cumplir este papel de conectores no es trivial En caso de que estos corredores fueran eficaces podriacutean tener un papel en la conservacioacuten de especies en el marco del cambio climaacutetico al ofrecer viacuteas de migracioacuten reduciendo el riesgo de extincioacuten de los taxones sensibles (Tikka et al 2001) Sin embargo para cumplir estos objetivos es pre-ciso revisar y adecuar las praacutecticas actuales de mantenimiento y limpieza de los espacios ane-jos a la viacutea

2 Propagacioacuten de invasiones bioloacutegicas Es un he-cho indiscutible que de entre todas las especies animales y vegetales introducidas procedentes de territorios geograacuteficamente alejados el 1permil altera draacutesticamente el funcionamiento ecoloacutegico de los territorios invadidos con efectos no de-seados en la economiacutea local en la forma de vida en los asentamientos humanos afectados y en la conservacioacuten del patrimonio natural Tal como se

ha destacado en el epiacutegrafe anterior los taludes de carretera son enclaves enriquecidos en espe-cies exoacuteticas que dada su geometriacutea podriacutean propiciar su propagacioacuten

En Espantildea este fenoacutemeno se ha visto agravado tanto por el desconocimiento de este fenoacutemeno por parte de los responsables del disentildeo ejecu-cioacuten y gestioacuten de las infraestructuras (Figura 15) como por el divorcio en los proyectos de obra entre los objetivos de integracioacuten ambiental y de acondicionamiento esteacutetico A la hora de estimar el riesgo debe tenerse en cuenta que tanto la frecuencia de invasiones como su propagacioacuten a lo largo de la viacutea se ve favorecida por la dispo-nibilidad de recursos (agua y nutrientes) por lo que seraacute mayor en la Espantildea atlaacutentica que en la mediterraacutenea

Figura 15 Manuales teacutecnicos publicados por la Administracioacuten es-pantildeola (Ruiz de la Torre 1990) recomiendan expresamente el uso del ailanto en proyectos de obra civil a pesar de que esta especie estaacute considerada como uno de los invasores maacutes agresivos en la cuenca del Mediterraacuteneo En la imagen los ejemplares de ailanto no son plantados sino que se propagan espontaacuteneamente por los taludes de la Ciudad Universitaria de Madrid

Razoacuten 5 por su potencial para promover valores naturales culturales y educativos

Actualmente los objetivos que se persiguen en los proyectos de revegetacioacuten de taludes de carretera son cuatro 1) estabilizacioacuten geoteacutecnica de los taludes y control de la erosioacuten 2) integracioacuten visual en el pai-saje 3) adecuacioacuten esteacutetica y 4) seguridad vial

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iquestES LA RESTAURACIOacuteN DE TALUDES DE LA RED VIARIA UN EJERCICIO DE JARDINERIacuteA O DE CONSERVACIOacuteN DEL PATRIMONIO NATURAL

La integracioacuten paisajiacutestica frecuentemente es el objetivo principal de la restauracioacuten de la cubierta vegetal en espacios afectados por obras civiles La eficacia de esta funcioacuten en amplias extensio-nes de la Peniacutensula Ibeacuterica es cuestionable de-bido a la profunda transformacioacuten antroacutepica del paisaje en la Cuenca del Mediterraacuteneo A lo largo de vastas extensiones los taludes de carreteras y viacuteas del ferrocarril deberiacutean ser sembrados con cereales abandonados o simplemente asfaltados si lo que se pretende es su convergencia con el

paisaje circundante La falta de un referente in-mediato de cubierta vegetal silvestre atribuiriacutea a la restauracioacuten una funcioacuten puramente esteacutetica siendo sus protocolos teacutecnicos un ejercicio de ajardinamiento

La escasa ambicioacuten de este planteamiento con-trasta con la estrategia adoptada en paiacuteses como Australia En las zonas mas pobladas del paiacutes el paisaje es una sucesioacuten de explotaciones agriacutecolas sin solucioacuten de continuidad las maacutergenes de las principales carreteras son los uacutenicos reductos en los que se mantiene la vegetacioacuten autoacutectona Las bandas de vegetacioacuten de entre 10 y 200 m a los lados de estas viacuteas constituyen una enorme red cuya extensioacuten solo en el estado de Victoria supera los 5500 km2 El reconocimiento del valor ecoloacutegi-co de este entramado de corredores ha conducido a su denominacioacuten como reservas (road reserves) Su gestioacuten compete a las administraciones respon-sables del transporte y del medio ambiente aseso-radas por comiteacutes cientiacuteficos

Estos objetivos no contemplan ni la singularidad de las comunidades de organismos asociados a la viacutea ni el valor de los taludes por su interaccioacuten ecoloacutegica con el entorno Las reflexiones presentadas en los cuatro epiacutegrafes anteriores sugieren que el nivel de ambicioacuten de las propuestas puede ser muy superior Ese salto cualitativo estariacutea vinculado a la incorporacioacuten de cri-terios ecoloacutegicos en la transformacioacuten del territorio El disentildeo ejecucioacuten y gestioacuten del acondicionamiento de los taludes de las infraestructuras de transporte podriacutea llegar a perseguir tanto la conservacioacuten de la biodiversidad como la educacioacuten ambiental

Conservacioacuten de la biodiversidad Los objetivos par-ticulares en el entorno de la infraestructura seriacutean los siguientes

bull Asegurar la calidad de las aguas y el control de la erosioacuten en el entorno de la viacutea

bull Proteger y favorecer los restos conservados de vegetacioacuten nativa

bull Identificar y proteger las especies amenaza-das de flora y fauna

bull Ubicar en funcioacuten del entorno y acondicionar los taludes como corredores para el desplaza-miento de la flora y fauna nativa

bull Acondicionar los taludes como haacutebitats para la vida silvestre preservando los recursos ne-cesarios para el desarrollo de las comunida-des de microorganismos vegetales de aves reptiles mamiacuteferos etc

bull Restablecer la vegetacioacuten nativa mediante protocolos que propicien la regeneracioacuten na-tural o mediante restauracioacuten activa

bull Identificar restaurar y proteger las riberas y humedales en el entorno de la viacutea

bull Asegurar la conservacioacuten del banco de diaacutes-poras y formas de resistencia

bull Controlar la colonizacioacuten y propagacioacuten de es-pecies invasoras y de otras plagas o agentes patoacutegenos

bull Regular el uso de los taludes por herbiacutevoros

bull Regular quemas controladas y evitar riesgos de incendio

bull Promover cubiertas vegetales que amortiguumlen las emisiones de contaminantes procedentes de la viacutea

bull Promover la capacidad de los taludes como sumideros de CO

2

Educacioacuten ambiental El objetivo general es divulgar los valores del patrimonio natural local a traveacutes de la identificacioacuten y reconstruccioacuten de paisajes repre-sentativos Como objetivos particulares incluye

bull Mantener y restaurar el atractivo visual del paisaje en el entorno de la viacutea

bull Identificar y proteger paisajes y enclaves con valor cultural o histoacuterico

bull Regular el uso recreativo de la viacutea y su entorno

Razoacuten 6 por imperativo legal o exigencia normativa

La Directiva comunitaria 85337CEE considera entre otros aspectos que los efectos de un proyecto sobre el medio ambiente deben evaluarse para proteger la salud humana contribuir mediante un mejor entorno a la calidad de vida velar por el mantenimiento de la diversidad de especies y para conservar la ca-pacidad de reproduccioacuten del sistema como recurso fundamental de la vida La incorporacioacuten en Espa-ntildea de esta Directiva 85337CEE al Derecho interno estatal se efectuoacute mediante el RDL 13021986 que experimentoacute sucesivas modificaciones y el Regla-mento que lo desarrolla el RD 11311988 Con pos-terioridad el RDL 12008 por el que se aproboacute el texto refundido de Ley de Evaluacioacuten de Impacto Ambiental de proyectos derogaba el RDL 13021986 y sus modificaciones y finalmente el RDL 12008 ha sido a su vez modificado por la reciente Ley 62010 Simultaacuteneamente la Directiva 85337CEE ha sido modificada por las Directivas 9711CE y 200335CE

En la actualidad praacutecticamente la totalidad de los proyectos de infraestructuras de transporte puacuteblicos

y privados que correspondan a autopistas y auto-viacuteas viacuteas raacutepidas y carreteras convencionales de nuevo trazado modificacioacuten del trazado o duplica-ciones de calzada de otras existentes en una longi-tud continuada de maacutes de 10 km y las liacuteneas de fe-rrocarril para traacutefico de largo recorrido deben some-terse a evaluacioacuten de impacto ambiental en la forma prevista en la Ley Mientras que la obligatoriedad de someter a evaluacioacuten de impacto ambiental el resto de carreteras y liacuteneas ferroviarias que quedan fuera del aacutembito competencial del Estado y no reuacutenan las anteriores caracteriacutesticas se determina en las corres-pondientes normativas autonoacutemicas

De modo general el proyecto para el tratamiento de los espacios afectados por las obras se articula en torno a los potenciales impactos ambientales Desde los Reales Decretos 13021986 y 11311988 se esta-blece que los estudios de impacto ambiental deben proponer las actuaciones necesarias para evitar re-ducir o compensar los efectos ambientales negativos significativos Estas acciones reciben el nombre de medidas protectoras (o preventivas) correctoras y compensatorias respectivamente La legislacioacuten baacute-sica de evaluacioacuten de impacto ambiental de proyec-tos sumada a sus homoacutelogas autonoacutemicas extien-de el dominio de aplicacioacuten de estas definiciones al aacutembito de las infraestructuras lineales que desde el punto de vista de la ecologiacutea de la restauracioacuten en el antildeo 1998 se definiacutea como un gigante dormido por Forman y Alexander gigante por la extensioacuten de superficie afectada y la trascendencia de la adopcioacuten de criterios ecoloacutegicos y dormido por la exigua re-percusioacuten de sus planteamientos aseveraciones por fortuna difiacuteciles de mantener en la actualidad

Razoacuten 7 por una nueva visioacuten en la construccioacuten de infraestructuras

Dos iniciativas una puacuteblica y otra privada plantean en la actualidad la revisioacuten de los criterios que se vienen empleando en la integracioacuten ambiental de las infraestructuras de transporte De una parte la elaboracioacuten del Plan Estrateacutegico de Infraestructuras y Transporte (PEIT) con el objetivo de proponer las medidas que puedan contribuir a mejorar la compe-titividad econoacutemica la cohesioacuten territorial y social y la seguridad y calidad del servicio desde los prin-cipios de racionalidad y eficiencia en el uso de los recursos (httppeitcedexes) Entre las recomenda-ciones del Informe de Sostenibilidad Ambiental del PEIT elaborado en enero de 2005 se planteaba la mejora de los procedimientos y las praacutecticas de eva-luacioacuten ambiental a todos los niveles de decisioacuten el

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incremento de la inversioacuten en seguimiento y control ambiental de todos los elementos del sistema de transporte y de forma destacable la mejora del co-nocimiento faacutectico de las relaciones entre el medio ambiente el territorio y el sistema de transporte a las diversas escalas que requiere el proceso de pla-nificacioacuten del transporte apoyar la I+D+i en tecno-logiacuteas de disminucioacuten del impacto ambiental de las infraestructuras y de los equipos del transporte

Para la consecucioacuten de estos objetivos el PEIT se plantea una inversioacuten de 248892 millones de euros y el horizonte temporal del 2020 al que se llegaraacute tras atravesar tres fases de desarrollo En la actuali-dad se ha completado la primera fase (2005-2008) en la que se persigue establecer las bases del cam-bio para el disentildeo de alternativas teacutecnicas que mejo-ren el comportamiento ambiental del sector

La segunda iniciativa que plantea una revisioacuten de los criterios con los que se viene disentildeando y ejecutan-do la construccioacuten de infraestructuras de transporte es la creacioacuten y puesta en marcha de la Plataforma Tecnoloacutegica de la Construccioacuten bajo el lema lsquoHacia el 2030 Innovacioacuten y cambio eficiente del Sector de la Construccioacutenrsquo Esta Plataforma pretende actuar sobre el nivel tecnoloacutegico del sector en Espantildea y persigue la mejora de la eficiencia de la productividad y de la seguridad asiacute como la disminucioacuten del impacto en el medio ambiente que el sector tiene actualmente Para ello la Plataforma estaacute formada por representantes de todos los agentes del sector de la construccioacuten en Espantildea Para minimizar los impactos ambientales esta Visioacuten 2030 se plantea como reto alcanzable a corto plazo la reduccioacuten significativa de las aacutereas afectadas por los trabajos y la revegetacioacuten de es-pacios degradados empleando especies autoacutectonas

VII ESTRUCTURA Y OBJETIVOS DEL LIBRO

El libro que el lector tiene en sus manos resume el conocimiento de un variado nuacutemero de especialistas que se interesan por la atenuacioacuten de los impactos y por la restauracioacuten ecoloacutegica de las aacutereas afecta-das por infraestructuras lineales El libro repasa la informacioacuten disponible para aspectos geomorfoloacute-gicos hidroloacutegicos edafoloacutegicos botaacutenicos fauniacutes-ticos ecoloacutegicos y tecnoloacutegicos los complementa con la realidad y la necesidad de los programas de seguimiento y vigilancia ambiental y nos recuerda lo que la legislacioacuten vigente especifica sobre impac-tos correcciones y restauraciones Pero el libro no se queda ahiacute ya que pretende anticipar los cambios de paradigma que se vislumbran en cada disciplina y aportar sugerencias concretas para modernizar la aproximacioacuten al problema ambiental generado con la creacioacuten de estas infraestructuras

En los capiacutetulos centrales del libro el lector no encontraraacute recetas concretas a seguir pero si los principios que pueden dar lugar a estas recetas

especiacuteficas para cada caso Se repasan los errores frecuentes y las ensentildeanzas que de ellos se pueden extraer y se describen casos exitosos que pueden servir de referencia El lector encontraraacute tambieacuten fuentes adicionales de informacioacuten tanto trabajos cientiacuteficos como fuentes documentales diversas y bases de datos en internet El libro pretende ser uacutetil para todos aquellos que trabajen en proyectos de infraestructuras de transporte o tengan intereacutes por la aplicacioacuten de los principios de la restaura-cioacuten ecoloacutegica a unos ecosistemas cada vez mas importantes Pero tambieacuten busca desafiar los pa-radigmas actuales y la normativa vigente abriendo temas que necesariamente deberaacuten ser abordados con mas profundidad en un futuro a medida que sepamos maacutes sobre estos ecosistemas nuevos emergentes que surgen tras la construccioacuten de es-tas omnipresentes infraestructuras y a medida que la sociedad en su conjunto vaya demandando un enfoque ambientalmente maacutes exigente de las acti-vidades humanas

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DO 1985 Directiva 85337CEE del Consejo de 27 de junio de 1985 relativa a la evaluacioacuten de las repercu-siones de determinados proyectos puacuteblicos y privados sobre el medio ambiente DO L 175 de 571985 p 4048 httpeur-lexeuropaeuLexUriServLexUriServdouri=CELEX31985L0337ESHTML

DO 1997 Directiva 9711CE del Consejo de 3 de marzo de 1997 por la que se modifica la Directiva 85337CEE relativa a la evaluacioacuten de las repercusiones de deter-minados proyectos puacuteblicos y privados sobre el medio ambiente DO L 73 de 1431997 p 515 httpeur-lexeuropaeuLexUriServLexUriServdouri=CELEX31997L0011ESHTML

DO 2003 Directiva 200335CE del Parlamento Euro-peo y del Consejo de 26 de mayo de 2003 por la que se establecen medidas para la participacioacuten del puacuteblico en la elaboracioacuten de determinados planes y programas relacionados con el medio ambiente y por la que se modifican en lo que se refiere a la participacioacuten del puacuteblico y el acceso a la justicia las Directivas 85337CEE y 9661CE del Consejo-Declaracioacuten de la Comisioacuten DO L 156 de 2562003 p 1725 httpeur-lexeuropaeuLexUriServLexUriServdouri=OJL200315600170024ESPDF

Notas sobre legislacioacuten

La Directiva comunitaria 85337CEE de junio de 1985 consideraba entre otros aspectos que los efectos de un proyecto sobre el medio ambiente deben evaluarse para proteger la salud humana contribuir mediante un mejor entorno a la calidad de vida velar por el mante-nimiento de la diversidad de especies y para conservar la capacidad de reproduccioacuten del sistema como recurso fundamental de la vida

La incorporacioacuten en Espantildea de esta Directiva 85337CEE al Derecho interno estatal se efectuoacute mediante norma con rango de Ley al aprobarse el Real Decreto Legislativo 13021986 Por su parte las comunidades autoacutenomas de acuerdo con las competencias que les reconocen los respectivos estatutos de autonomiacutea han desarrollado la normativa baacutesica de evaluacioacuten de im-pacto ambiental

Con posterioridad la Directiva 9711CE del Consejo ampliacutea esta obligacioacuten a la construccioacuten de nuevas ca-rreteras de cuatro carriles o maacutes o realineamiento yo ensanche de una carretera existente de dos carriles o menos con objeto de conseguir cuatro carriles o maacutes cuando tal nueva carretera o el tramo de carretera rea-lineado yo ensanchado alcance o supere los 10 km en una longitud continua

PLANTAS DE TALUDES

Los espacios que circundan las carre-teras son considerados en la actua-lidad terrenos marginales Curiosa-mente prosperan numerosas espe-cies vegetales de indudable belleza como las que se muestran a conti-nuacioacuten De arriba abajo cebolla de culebra (Asphodelus fistulosus) lechetrezna (Euphorbia helioscopia) y clavel de asno (Agrosthemma gi-thago) Autor Ignacio Mola

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2Consideraciones geomorfoloacutegicas e hidroloacutegicas

Joseacute F Martiacuten Duque Saturnino de Alba y Fernando Barbero Abolafio

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se puede llegar a la misma conclusioacuten que para Es-tados Unidos

Estas reflexiones parecen estar fuera del aacutembito de las ciencias geoloacutegicas y geomorfoloacutegicas de modo que mover tierras para construir una infraestructura lineal o el asfaltado de carreteras no se consideran temas o procesos centrales de esas ciencias Sin em-bargo las cifras aportadas muestran escenarios en los que las actividades humanas se han convertido en el principal agente geomorfoloacutegico que actual-mente modifica la superficie terrestre Entre ellas la construccioacuten de infraestructuras lineales es una de las maacutes importantes Por todo ello la transforma-cioacuten de la superficie terrestre debida a esta actividad constructiva deberiacutea estar entre la corriente domi-nante de los trabajos geoloacutegicos y geomorfoloacutegicos actuales

Respecto a superficies afectadas Hooke et al (2010) utilizando datos de todos los paiacuteses que cuentan con informacioacuten disponible a este respecto han es-timado que alrededor de 06 millones de kiloacutemetros cuadrados de la superficie terrestre estaacuten ocupados por infraestructuras lineales en zonas rurales (exclui-da su ocupacioacuten en aacutereas urbanas que computariacutea como superficies urbanas) Todo ello supone una ocupacioacuten de aproximadamente un 05 de la su-perficie terrestre continental libre de hielos

En paiacuteses desarrollados este porcentaje se situacutea en torno al 1 Forman y Alexander (1998) y Forman (2000) sostienen que los corredores de carreteras cubririacutean aproximadamente el 1 de Estados Uni-dos citando para ello datos del National Research Council (1997 p 181) Por su parte Luis Balaguer (com pers) utilizando datos oficiales del Ministe-rio de Fomento tambieacuten ha estimado que maacutes de 5000 km2 (lo que equivale a un 1 de la superficie de nuestro paiacutes o a 10 veces el tamantildeo del Parque Nacional de Dontildeana) estaacuten cubiertos por autoviacuteas autopistas o carreteras

El aacuterea total ocupada por infraestructuras lineales de transporte (el 05 de la superficie continental libre de hielos alrededor del 1 en paiacuteses desa-rrollados) puede parecer pequentildea Sin embargo los efectos ambientales de estas superficies alteradas son mucho mayores de lo que podriacutean sugerir esas cifras Asiacute Forman y Alexander (1998) estiman que entre el 15 y el 20 de la superficie de los Estados Unidos estaacute ecoloacutegicamente afectada por carreteras considerando todos los impactos que estas ocasio-nan fragmentacioacuten de haacutebitats emisioacuten de agentes contaminantes escorrentiacutea y sedimentos que causan

efectos adversos en amplias superficies terrestres y acuaacuteticas entre otros

Como es faacutecil de comprender lo maacutes probable es que todas estas cifras se incrementen en un futuro en un escenario en el que se mantiene el crecimiento imparable de la poblacioacuten mundial y el desarrollo econoacutemico de los paiacuteses emergentes Por consi-guiente se ejerceraacute una importante presioacuten cons-tructiva sobre muchos territorios visible ya en de-terminados aacutembitos (Figura 1) Todo ello refuerza la enorme importancia que tiene la integracioacuten ambien-tal y la restauracioacuten ecoloacutegica de estos espacios con el fin de minimizar la peacuterdida de bienes y servicios ambientales para el conjunto de la sociedad

Figura 1 La presioacuten constructiva sobre muchos territorios es tal que como en el caso que muestra la fotografiacutea el trazado de una carretera anterior relleno por materiales de escombrera puede quedar incorporado a modo de registro sedimentario en el des-monte de una carretera maacutes reciente La liacutenea blanca discontinua sentildeala esta exposicioacuten singular Sobre ella pueden identificarse un corte perpendicular de la plataforma de la carretera el asfalto (A) las cunetas (B) y los antiguos desmontes (C) (Foto F Barbero)

2 Un enfoque geomorfoloacutegico para comprender el problema

Cualquier superficie terrestre funciona como un sis-tema que tiende a mantener un lsquoequilibrio dinaacutemicorsquo entre las formas del terreno que observamos y los procesos geomorfoloacutegicos e hidroloacutegicos que actuacutean sobre ellas En efecto con anterioridad a las modi-ficaciones humanas la mayor parte de las cuencas hidrograacuteficas en que se organiza el territorio estaacuten proacuteximas a una situacioacuten de equilibrio (que es siem-pre dinaacutemico) y los procesos de erosioacuten transporte y sedimentacioacuten estaacuten adaptados a las condiciones ambientales existentes (Graf 1977)

La construccioacuten de infraestructuras lineales supone una perturbacioacuten antroacutepica de primera magnitud en

CAPIacuteTULO 2 Consideraciones geomorfoloacutegicas e hidroloacutegicas

Joseacute F Martiacuten Duque Saturnino de Alba y Fernando Barbero Abolafio

I INTRODUCCIOacuteN

1 La construccioacuten de infraestructuras lineales como proceso geomorfoloacutegico

El movimiento de tierras asociado a la construccioacuten de infraestructuras lineales constituye uno de los procesos geomorfoloacutegicos maacutes activos y efectivos a escala global Hooke (1994) estimoacute que la construc-cioacuten de carreteras en Estados Unidos movilizaba tres gigatoneladas de materiales al antildeo (en 1994) Esta cifra suponiacutea casi el 40 del total de movimientos de tierras por actividades humanas en Estados Uni-dos completado por 1 Gtantildeo de la urbanizacioacuten y 38 Gtantildeo de la mineriacutea de superficie Y la suma de todos ellos se situaba en el mismo orden de mag-nitud que lo estimado para los agentes geoloacutegicos denominados lsquonaturalesrsquo en ese contexto espacial y temporal (riacuteos glaciares vientohellip) (Hooke 1994)

En Espantildea la previsioacuten inicial del Plan Espantildeol de Infraestructuras de Transportes (PEIT) era construir entre 2005 y 2020 un total de 6000 km de auto-viacuteas y autopistas y 9000 km de ferrocarril de alta velocidad incluyendo la adecuacioacuten de liacuteneas exis-tentes a altas prestaciones (Ministerio de Fomento 2005) Utilizando una estimacioacuten de movimiento de tierras de 10 m3 por metro lineal construido y una densidad aparente de 2 tm3 se obtiene una cifra de movimiento de tierras de en torno a 300 millo-nes de toneladas (20 millones de toneladas al antildeo) De nuevo utilizando la estimacioacuten del transporte de sedimentos desde los riacuteos hasta los oceacuteanos para Espantildea a partir del trabajo de Syvitski et al (2005)

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tanto no solo modifica la cubierta vegetal y edaacutefica sino todos los componentes de la superficie terres-tre (como sustrato y topografiacutea) Ello origina todo un conjunto de nuevas formas del terreno a modo de auteacutenticas morfologiacuteas erosivas (pe desmontes) y de verdaderas acumulaciones sedimentarias (pe terraplenes) asiacute como nuevas condiciones hidroloacutegi-cas y edaacuteficas En definitiva la apertura de infraes-tructuras lineales altera las condiciones de ese lsquoequi-librio dinaacutemicorsquo Normalmente se produce una acele-racioacuten de los procesos geomorfoloacutegicos activos en el dominio de carreteras y ferrocarriles pero tambieacuten ocurre una deceleracioacuten o anulacioacuten de los mismos como sucede en las superficies pavimentadas En todo caso siempre acontece una modificacioacuten de los flujos de agua y materiales en todo su contexto

Los nuevos procesos desencadenados por la cons-truccioacuten de infraestructuras lineales que actuacutean so-bre las nuevas formas del relieve creadas (desmontes

Figura 3 Morfologiacuteas que se desarrollan de manera maacutes lsquotiacutepicarsquo sobre cada una de las litologiacuteas detriacuteticas que caracterizan los desmontes de las infraestructuras lineales de la cuenca de Madrid bajo condiciones climaacuteticas mediterraacuteneas (en Barbero et al 2009a) (Fotos JF Martiacuten Duque)

terraplenes bermas plataformashellip) y sobre su en-torno son una manifestacioacuten del trabajo geomorfo-loacutegico para restablecer un nuevo equilibrio dinaacutemico entre las formas del terreno creadas por la actividad constructiva y los procesos geomorfoloacutegicos activos que son caracteriacutesticos de las condiciones ambienta-les locales (Schumm y Rea 1995) Este es el motivo por el cual el entorno de las infraestructuras lineales especialmente los desmontes de carreteras y ferro-carriles constituyen escenarios donde la dinaacutemica geomorfoloacutegica es muy evidente (Petersen 2002)

Para analizar y comprender esa dinaacutemica es posible seguir una aproximacioacuten geomorfoloacutegica lsquoclaacutesicarsquo basada en el anaacutelisis de las formas del terreno y de los procesos que las originan (Pedraza 1996) La diferencia fundamental es la escala de detalle de este nuevo anaacutelisis (Figura 2) que permite hablar de toda una lsquogeomorfologiacutea de carreterasrsquo ya iniciada en algunos trabajos (Barbero et al 2009a Figura 3)

Figura 2 Flujos de barro (mudflows) en un pequentildeo desmonte de una carretera local Los procesos geomorfoloacutegicos que se desarrollan en estos desmontes son similares a los que operan en otros ambientes continentales (por ejemplo zonas de montantildea) pero tienen mucho menor tamantildeo (Foto JF Martiacuten Duque)

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A Distinta respuesta morfoloacutegica seguacuten la litolo-giacutea Sobre conglomerados (con tonos maacutes grisaacute-ceos) la red de drenaje tiene un menor grado de incisioacuten debido a la presencia de cantos y blo-ques que dificultan el encajamiento en los ma-teriales maacutes arenosos (con tonos maacutes rojizos) la escorrentiacutea concentrada consigue desarrollar una red paralela de regueros (rills)

B Patroacuten de drenaje paralelo muy bien definido El espaciado regular entre el conjunto de regueros (rills) y sus interfluvios en la base del desmonte se interpreta como una herencia del acabado del talud con las untildeas de una retroexcavadora que posteriormente es remodelado y exagerado por la erosioacuten hiacutedrica

C Los procesos erosivos actuacutean de manera raacutepida y efectiva en desmontes desarrollados sobre ma-teriales no consolidados o poco consolidados y son maacutes efectivos cuanto maacutes arenoso es el ma-terial del desmonte La red de drenaje en este tipo de materiales arenosos es subparalela ten-dente a dendriacutetica

D La presencia de materiales arcillosos en los ta-ludes favorece el desarrollo de redes de drenaje con una mayor tendencia a ser dendriacuteticas Se reproduce asiacute a escala de gran detalle el mismo tipo de red de drenaje que ocurre en paisajes dominados por sustratos de dominancia arcillosa

E Los desmontes construidos sobre lutitas con fre-cuencia son maacutes verticales que sobre otros mate-riales puesto que su cohesioacuten lo permite Estas paredes casi verticales sufren procesos de meteo-rizacioacuten formando estructuras tipo pop-corn una especie de lsquocostrarsquo que en este caso tiene entre unos pocos miliacutemetros y 2 cm de espesor y se agrieta formando poliacutegonos de 3-4 cm de radio Estos lsquofragmentos de cortezarsquo sufren caiacutedas acu-mulaacutendose en la base del desmonte a modo de talud de derrubios Una vez que la costra se cae esta vuelve a formarse y a fragmentarse a partir de sucesivos ciclos de humectacioacuten-desecacioacuten hasta que vuelven a sufrir nuevas caiacutedas Ocasio-nalmente aparecen morfologiacuteas de tipo flujo de barro (mudflow)

F Los desmontes de la imagen reproducen en mi-niatura el modelo geomorfoloacutegico de un escarpe montantildeoso La parte superior de talud aparece expuesta a los procesos de meteorizacioacuten-ero-sioacuten y la base del talud se caracteriza por una acumulacioacuten de derrubios a modo de lsquoderrame

enormemente su dinaacutemica geomorfoloacutegica de modo que las rocas lsquodurasrsquo (macizos rocosos) son propen-sas a la ocurrencia de movimientos gravitacionales (como caiacutedas y desprendimientos) pero no a la ero-sioacuten hiacutedrica mientras que las rocas lsquoblandasrsquo (referi-das frecuentemente como lsquosuelosrsquo en el mundo de la ingenieriacutea) son maacutes propensas a la erosioacuten hiacutedrica aunque tambieacuten desarrollan movimientos gravitacio-nales (como deslizamientos y flujos) El clima es otro factor de primer orden los climas lsquohuacutemedosrsquo favorecen la ocurrencia de movimientos gravitacio-nales por saturacioacuten y aumento de la presioacuten del agua en el sustrato mientras que en climas ten-dentes a la aridez como los mediterraacuteneos semiaacute-ridos o aacuteridos la erosioacuten hiacutedrica es muy intensa dado que las precipitaciones aunque escasas y de corta duracioacuten tienen gran intensidad Finalmente

dentro de un mismo contexto geoloacutegico y climaacute-tico los desmontes y los terraplenes constituyen dos mundos aparte dado que los primeros dejan expuestos sustratos geoloacutegicos de muy distinta naturaleza mientras que los segundos se constru-yen a partir de materiales lsquosueltosrsquo cuyas carac-teriacutesticas fiacutesicas aun compactados les hacen muy diferentes a los desmontes

En Espantildea las principales limitaciones geomor-foloacutegicas a la restauracioacuten ecoloacutegica tienen lugar cuando se solapan en un mismo territorio el clima mediterraacuteneo semiaacuterido con precipitaciones esca-sas pero intensas y litologiacuteas no consolidadas o deacutebilmente consolidadas (como arenas limos arci-llas margas o yesos) lo que resulta en procesos de erosioacuten hiacutedrica muy intensa (veacutease Figura 3)

de laderarsquo (talus slope) que muestra una gran actividad geomorfoloacutegica Puntualmente son re-conocibles canales y acumulaciones de flujos de derrubios (debris flow) de nuevo en miniatura

El disentildeo y construccioacuten de las infraestructuras li-neales deben estar encaminados a reorganizar la red de drenaje que se modifica y a garantizar una esta-bilidad geoteacutecnica del conjunto dadas las caracteriacutes-ticas de seguridad que deben existir en estos espa-cios En este contexto el teacutermino lsquoinestabilidadrsquo apli-cado a taludes de infraestructuras lineales se asocia mayoritariamente a la ocurrencia o a la propensioacuten de ocurrencia de los llamados lsquoprocesos gravitacio-nalesrsquo lsquomovimientos de laderarsquo o lsquomovimientos en masarsquo de tipo caiacutedas flujos y deslizamientos (Pedra-za 1996) y que son normalmente de cierta entidad

Sin embargo los criterios de seguridad geoteacutecnica no aseguran por siacute solos una estabilidad completa de los taludes puesto que casi siempre existe una inestabilidad geomorfoloacutegica gravitacional lsquomenorrsquo (movimientos en masa muy superficiales) y sobre todo asociada a la erosioacuten hiacutedrica (arranque y trans-porte de materiales por el flujo de la escorrentiacutea)

La inestabilidad del sustrato de taludes de infraes-tructuras lineales debida a movimientos gravita-cionales superficiales y a la erosioacuten hiacutedrica limita extraordinariamente sus posibilidades de restaura-cioacuten ecoloacutegica al evacuar de ellos agua nutrien-tes y diaacutesporas vegetales (veacutease capiacutetulo sobre ve-getacioacuten) Tanto es asiacute que existen ya demasiados ejemplos de fallos en los protocolos de revegetacioacuten habituales en estos espacios debidos a la inestabi-lidad geomorfoloacutegica

En este contexto las labores de disentildeo construccioacuten y restauracioacuten de infraestructuras lineales deberiacutean tratar de comprender y minimizar las modificaciones hidroloacutegicas y la actividad geomorfoloacutegica asiacute como de controlarla y manejarla adecuadamente desde su conocimiento dejando un lsquoajuste maacutes finorsquo a los procesos naturales que actuaraacuten despueacutes de esas intervenciones (Toy y Black 2000) Obviamente la consideracioacuten realizada es muy general y debe adap-tarse a los distintos condicionantes y escenarios

Dentro de estos y como una primera aproximacioacuten habriacutea que distinguir entre el marco litoloacutegico y cli-maacutetico asiacute como la naturaleza del talud puesto que una variacioacuten de cada uno de esos factores introdu-ce otros de naturaleza ecoloacutegica que son determi-nantes Asiacute por ejemplo el tipo de sustrato sobre el que se construye la infraestructura condiciona

II REVISIOacuteN DEL CONOCIMIENTO

Existen dos grandes bloques de antecedentes biblio-graacuteficos sobre los aspectos tratados en este capiacutetulo Por un lado se situacutean los que podriacuteamos denominar lsquotradicionalesrsquo o lsquoconvencionalesrsquo dejando claro que esta clasificacioacuten ni tiene caraacutecter peyorativo ni les resta validez pues constituyen el punto de partida para otros enfoques

Estos pueden tener a su vez naturaleza hidroloacutegica o geoteacutecnica Es preciso explicar que este capiacutetulo intenta sintetizar sus aspectos esenciales pero en ninguacuten caso intenta incorporar una revisioacuten detalla-da sobre ellos dado que estaacuten ampliamente desa-rrollados en muy diversas publicaciones De ellas se ofrece una seleccioacuten de referencias uacutetiles en cas-tellano

Asiacute las cosas para el control del drenaje superficial (escorrentiacutea y sus caudales punta) aspecto funda-mental en la construccioacuten de infraestructuras linea-les existe una instruccioacuten de carreteras (52-1C) de obligado cumplimiento basada en el meacutetodo racio-nal con uso del nuacutemero de curva en la estimacioacuten de las abstracciones iniciales (BOE 1990) Ambos meacutetodos estaacuten bien desarrollados en el manual ya claacutesico de TRAGSA (1994)

Respecto a los antecedentes sobre estabilidad geo-teacutecnica de taludes dado que los movimientos gra-vitacionales (caiacutedas deslizamientos flujoshellip) son el tipo de inestabilidad maacutes comuacuten en el entorno de las infraestructuras lineales la literatura sobre este

tipo de procesos es abundante Algunos libros mo-dernos en castellano son los de Gonzaacutelez de Vallejo (2002) o Ayala y Andreacuteu (2006)

En estos manuales se desarrollan las medidas ha-bituales para la prevencioacuten y correccioacuten de movi-mientos del terreno en taludes de infraestructuras lineales como el empleo de bulones que ayudan a mantener la friccioacuten entre bloques adyacentes de rocas el uso de todo tipo de mallas o la instalacioacuten de drenajes que evacuan el agua del interior de los taludes evitando el aumento de su presioacuten y redu-ciendo por tanto la probabilidad de que ocurran inestabilidades

El estudio y la adopcioacuten de medidas hidroloacutegicas y geoteacutecnicas que aquiacute hemos agrupado como lsquotradi-cionalesrsquo o lsquoconvencionalesrsquo pueden ser necesarios en una parte de los casos ya sea como punto de partida o bien como solucioacuten definitiva Pero al mis-mo tiempo es preciso sentildealar que el control o ma-nejo de las dinaacutemicas hidroloacutegica y geomorfoloacutegica en el entorno de las infraestructuras lineales reali-zado desde una aproximacioacuten ecoloacutegica requiere ir maacutes allaacute de esos planteamientos baacutesicos Incluso puede diferir sustancialmente de ellos Esto es asiacute porque el criterio que ha regido y rige las actua-ciones sobre estas materias en las infraestructuras lineales ha tenido y tiene en cuenta casi exclusi-vamente factores de seguridad Y si bien es obvio que este factor no puede descuidarse en absoluto no es menos cierto que existen ya experiencias que

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III INCIDENCIA DE LOS PROCESOS GEOLOacuteGICOS E HIDROLOacuteGICOS ACTIVOS SOBRE LAS INFRAESTRUCTURAS RIESGOS NATURALES

Si bien la construccioacuten de infraestructuras lineales tiene como consecuencia el desencadenamiento de toda una serie de procesos geomorfoloacutegicos activos (que seraacuten tratados en el siguiente apartado) lo cier-to es que existen posibles afecciones de procesos geoloacutegicos e hidroloacutegicos activos cuya ocurrencia no estaacute asociada en principio ni a las infraestructuras lineales ni a los efectos de su construccioacuten Es el caso de terremotos erupciones volcaacutenicas grandes deslizamientos de laderas o procesos de erosioacuten o inundacioacuten que afectan a las infraestructuras linea-les sin que la construccioacuten de estas uacuteltimas tenga influencia alguna en los primeros

consiguen garantizar el objetivo de hacer posible un transporte seguro y eficiente de personas y bienes a lo largo del territorio asegurando simultaacuteneamente una disminucioacuten de sus efectos ecoloacutegicos una in-tegracioacuten ambiental eficiente y una reduccioacuten de los costes econoacutemicos (veacutease maacutes adelante por ejem-plo la solucioacuten del lsquotalud Royalrsquo)

En esta oacuterbita se situacutea un segundo bloque de an-tecedentes bibliograacuteficos que persigue introducir nuevas consideraciones geomorfoloacutegicas e hidroloacute-gicas para la integracioacuten ambiental y la restauracioacuten ecoloacutegica del entorno de infraestructuras lineales Este enfoque requiere en general soluciones maacutes imaginativas maacutes flexibles y un anaacutelisis particu-larizado del contexto hidroloacutegico y geomorfoloacutegico del lugar que se modifica Todo lo cual se aleja en cierto modo del modus operandi dominante carac-terizado por lsquouna forma rutinaria de hacer las cosasrsquo (bussiness as usual) En este sentido el objetivo de este capiacutetulo es proporcionar unas consideraciones generales pero no por ello menos importantes que permitan lsquorepensarrsquo los proyectos de disentildeo cons-truccioacuten y restauracioacuten de infraestructuras lineales desde una perspectiva que considere como conjunto esencial de las mismas su dinaacutemica geomorfoloacutegica e hidroloacutegica

Para abordar ese enfoque la revisioacuten del conoci-miento no puede centildeirse a trabajos en castellano por ser muy escasos y parte de una serie de es-tudios realizados desde las deacutecadas de los sesen-ta y los setenta en Estados Unidos Estos abordan cuestiones sobre cuantificacioacuten de los procesos de escorrentiacutea erosioacuten y sedimentacioacuten hiacutedricas en ta-ludes de infraestructuras lineales y sobre la adop-cioacuten de medidas para su control Inicialmente los trabajos consistieron en una aplicacioacuten de la expe-riencia adquirida sobre erosioacuten en tierras agriacutecolas como la Ecuacioacuten Universal de Peacuterdidas del Suelo (USLE) que luego fueron completados con estudios experimentales ad hoc (Diseker y Richardson 1961 1962 Diseker y Sheridan 1971 Meyer et al 1971 Meyer y Roumlmkens 1976) Posteriormente estos tra-bajos tuvieron un mayor desarrollo de nuevo en Estados Unidos a partir de la aprobacioacuten en 1972 de la Clear Water Act Esta ley se dictoacute para pro-teger la calidad de las aguas continentales y los ecosistemas acuaacuteticos de la emisioacuten de escorrentiacutea y sedimentos desde las denominadas zonas lsquocons-truidasrsquo (minas carreteras urbanizacioneshellip) hacia los cauces naturales

En el marco de la Clear Water Act los estudios se refirieron inicialmente a los efectos hidroloacutegicos

debidos a la construccioacuten de pistas y carreteras forestales (Megahan 1977 Reid y Dunne 1984 Montgomery 1994 Gucinski et al 2000) La im-portancia de estos trabajos dariacutea lugar en el antildeo 2001 a la publicacioacuten de un monograacutefico espe-cial de la revista Earth Surface Processes and Lan-dforms sobre los efectos hidroloacutegicos y geomor-foloacutegicos de las carreteras forestales (Luce y Wemple 2001)

En paralelo al estudio de los efectos geomorfoloacutegico e hidroloacutegico de las pistas forestales se fueron de-sarrollando trabajos que abordan especiacuteficamente la temaacutetica geomorfoloacutegica en el aacutembito de las ca-rreteras y las viacuteas raacutepidas Alguno de estos trabajos tiene maacutes de 40 antildeos (Parker y Jenne 1967) y otros son bastante maacutes recientes (Haigh 1985 Al-Homoud et al 1999 Nyssen et al 2002)

La publicacioacuten de soluciones para el control efectivo de la erosioacuten y la sedimentacioacuten desde el aacutembito general de zonas sujetas a movimientos de tierras o lsquozonas construidasrsquo es comuacuten de nuevo en Es-tados Unidos (Gray y Sotir 1996 Fifield 2004 Ho-gan y Drake 2009 Bugosh 2006 y en general todo lo relacionado con la International Erosion Control Association IECA httpwwwiecaorg) De manera especiacutefica la mayoriacutea de los estados de ese paiacutes cuenta con manuales e instrucciones detalladas so-bre el control de la erosioacuten y sobre el resto de los aspectos tratados en este capiacutetulo (veacutease a modo de ejemplo WSDOT 2010)

A su vez cabe destacar que algunos trabajos recien-tes estaacuten desarrollando anaacutelisis sobre la calidad de las aguas procedentes de la escorrentiacutea de las carre-teras (Riley et al 2008)

Sin embargo en Espantildea los temas sobre cuantifi-cacioacuten de los procesos de escorrentiacutea erosioacuten y se-dimentacioacuten hiacutedricas en taludes de infraestructuras lineales y la buacutesqueda de medidas de control efi-caces pueden considerarse como liacuteneas de trabajo (tanto desde un punto de vista profesional como desde la investigacioacuten) muy poco desarrolladas Ello puede ser debido quizaacutes a la inexistencia de normativas similares a la Clear Water Act En todo caso la guiacutea para la elaboracioacuten de estudios de im-pacto ambiental de carreteras y ferrocarriles (MOPU 1989) sintetiza bien los aspectos clave que deben abordarse en referencia a los aspectos tratados en este capiacutetulo (recogidos alliacute bajo los epiacutegrafes de geologiacutea geomorfologiacutea hidrologiacutea y suelos) Y otra serie de trabajos maacutes especiacuteficos constitu-yen ya un cataacutelogo de antecedentes de intereacutes en

La prediccioacuten y prevencioacuten de este tipo de afeccio-nes no inducidas por la construccioacuten de carrete-ras y ferrocarriles deberiacutea formar parte de un tipo de estudios especiacuteficos sobre riesgos geoloacutegicos y naturales desarrollados en las fases iniciales de consideracioacuten de alternativas y de disentildeo de esas infraestructuras lineales Este tipo de anaacutelisis no se considera en este manual por superar sus objetivos y se emplaza al usuario a utilizar otras guiacuteas que los tratan en profundidad Veacuteanse por ejemplo en castellano y recientes Ayala y Olcina (2002) Aramburu et al (2006) Keller y Blodgett (2007) o Regueiro (2008)

IV INCIDENCIA DE LAS INFRAESTRUCTURAS SOBRE EL MEDIO IMPACTO GEOMORFOLOacuteGICO E HIDROLOacuteGICO

1 Las causas

Las modificaciones que introducen las infraestruc-turas lineales sobre las caracteriacutesticas geoloacutegicas geomorfoloacutegicas edaacuteficas e hidroloacutegicas pueden analizarse a dos niveles a escala de ladera por variacioacuten de las condiciones fiacutesicas locales de los nuevos taludes creados y a escala de paisaje por alteracioacuten de los flujos y los procesos que operan en el entorno de las infraestructuras

a Modificacionesdelascondicionesgeomorfoloacutegicasehidroloacutegicaslocales

El acabado final de los taludes de las infraestruc-turas lineales transforma una serie de factores que favorecen su inestabilidad geomorfoloacutegica tales como producir un aumento de la pendiente cortar niveles freaacuteticos y modificar las propiedades fiacutesicas de los sustratos expuestos entre otros

Ciertamente la praacutectica constructiva de infraestruc-turas lineales lleva aparejada un aumento de la pendiente local de una buena parte del territorio modificado La alteracioacuten de este factor por siacute solo

contribuye a aumentar la inestabilidad de los nue-vos taludes creados En otros casos sin embargo puede producirse una disminucioacuten de la pendiente como ocurre en las propias plataformas o en algu-nos terraplenes

A su vez una buena parte de las excavaciones asociadas a la construccioacuten de infraestructuras cortan formaciones geoloacutegicas que almacenan y transmiten agua lo que origina surgencias y re-zumes en los desmontes Esta circunstancia que podriacutea parecer una ventaja para la restauracioacuten ecoloacutegica en ambientes semiaacuteridos acaba convir-tieacutendose en la mayor parte de los casos en un pro-blema porque acelera la actividad geomorfoloacutegica de los desmontes Se desencadenan asiacute distintos tipos de movimientos gravitacionales los cuales aparecen recogidos en la literatura como seepage erosion La experiencia muestra coacutemo la previsioacuten de afectar a la dinaacutemica de las aguas subterraacuteneas es uno de los aspectos menos considerados y maacutes difiacuteciles de controlar en la construccioacuten de carrete-ras y ferrocarriles (Figuras 4 y 5)

nuestro paiacutes (Arnaacuteez y Larrea 1995 Andreacutes y Jorba 2000 Navarro 2002 Bochet y Garciacutea-Fayos 2004

Bochet et al 2007a 2007b y 2010 Barbero et al 2009a 2009b)

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Figura 4 Cabecera de deslizamiento (A) y derrubios movilizados (B) en un desmonte de carretera a favor de una surgencia de agua (C) producida en el contacto entre una roca impermeable (D) y unos cantos y bloques permeables (E) correspondientes a un depoacutesito de abanico aluvial (Foto JF Martiacuten Duque)

Figura 5 Ejemplo de seepage erosion en un desmonte construido sobre materiales arenosos (Foto J Vaacutezquez)

De manera adicional se modifican las propiedades fiacutesicas de las nuevas superficies expuestas sobre

Figura 7 Ejemplo de encharcamiento ocasionado por el efecto lsquobarrera o presarsquo que ejerce la carretera sobre el flujo hidroloacutegico superficial y subterraacuteneo procedente de la ladera de la derecha de la imagen (Foto JF Martiacuten Duque)

Una consecuencia maacutes es la modificacioacuten que se produce en la recarga de los acuiacuteferos como conse-cuencia de las alteraciones de la dinaacutemica hidroloacutegi-ca superficial y subterraacutenea antes descritas

2 Los efectos Impactos geomorfoloacutegicos e hidroloacutegicos habituales

Al igual que las causas los impactos geomorfoloacutegi-cos e hidroloacutegicos ocasionados por la construccioacuten de las infraestructuras lineales pueden agruparse en dos grandes tipologiacuteas efectos sobre el propio aacutembito de las construcciones (on-site effects) y efectos sobre el entorno de las construcciones (off-site effects)

a Efectoson-site

Las consecuencias que produce la modificacioacuten de la pendiente y la alteracioacuten de las propiedades fiacutesicas e hidroloacutegicas de los nuevos sustratos expuestos en los taludes fundamentalmente en los desmontes se manifiestan generalmente en un aumento de la escorrentiacutea y en una mayor intensidad de los pro-cesos erosivos Ello limita el desarrollo del suelo y el establecimiento de la vegetacioacuten dificultando los procesos de restauracioacuten ecoloacutegica (veacuteanse capiacutetu-los sobre suelo y vegetacioacuten)

Estos procesos son particularmente severos en am-bientes de clima mediterraacuteneo semiaacuterido donde el

exceso de escorrentiacutea dificulta mucho su control y manejo Y se traduce en una baja disponibilidad hiacute-drica para las plantas lo que condiciona extraordina-riamente su germinacioacuten y establecimiento (Bochet et al 2007a)

Uno de los efectos maacutes evidentes de la erosioacuten hiacutedri-ca sobre los desmontes de carreteras y ferrocarriles es la emisioacuten de sedimentos desde los mismos que se acumulan a su pie o en las distintas superficies colectoras pavimentadas o no (Figura 8) Estos fe-noacutemenos si bien en la mayoriacutea de los casos no constituyen un riesgo para la seguridad vial siacute que afectan con frecuencia a bienes y servicios y supo-nen uno de los principales costes de mantenimiento de las infraestructuras lineales Por otro lado algu-nos avances e inversiones relevantes en las viacuteas como puede ser el uso de pavimentos o asfaltos permeables o de nuevos materiales pueden fraca-sar como consecuencia del efecto impermeabilizante que tienen las emisiones de materiales finos proce-dentes de la erosioacuten de los taludes transportados hasta alliacute por la accioacuten del agua o del viento

Figura 8 Acumulacioacuten de sedimentos procedentes de un desmonte que praacutecticamente colmata una cuneta (Foto JF Martiacuten Duque)

Si la erosioacuten en los taludes se convierte en el proceso dominante la restauracioacuten se veraacute com-prometida Se puede afirmar que sin un lsquomanejorsquo adecuado de la dinaacutemica superficial de los talu-des que proporcione a los mismos una estabilidad geomorfoloacutegica suficiente la mayoriacutea de los planes de restauracioacuten y de revegetacioacuten estaacuten abocados al fracaso (Figura 9)

A

B

D

E

C

todo en el caso de la construccioacuten de desmontes Asiacute por ejemplo los procesos de excavacioacuten ori-ginan procesos de lsquodescompresioacutenrsquo (descompac-tacioacuten y lsquoesponjadorsquo en los sustratos expuestos) como resultado de la disminucioacuten brusca de las presiones litostaacuteticas confinantes lo que favorece su fragmentacioacuten e inestabilidad Este fenoacutemeno es muy evidente cuando se excavan macizos ro-cosos Y si se construyen desmontes sobre rocas lsquoblandasrsquo los acabados lsquoestaacutendarrsquo suelen generar superficies lisas y compactadas lo que tiene como consecuencia innumerables efectos limitantes para la restauracioacuten (como pe una erosioacuten hiacutedrica se-vera) los cuales se desarrollan en el epiacutegrafe 2a de este capiacutetulo

b Modificacionesdelascondicionesgeomorfoloacutegicasehidroloacutegicasdelentorno

La consecuencia hidroloacutegica maacutes evidente de la construccioacuten de infraestructuras lineales es lo que se conoce como lsquoefecto barrerarsquo Los trazados de carreteras y ferrocarriles se convierten asiacute en toda una red de barreras hidroloacutegicas longitudinales que modifican la dinaacutemica hidroloacutegica superficial y subterraacutenea previa Ello produce la intercepcioacuten desviacioacuten y descarga concentrada de la escorren-tiacutea Las cunetas interceptan y desviacutean la escorren-tiacutea local que finalmente es liberada de manera concentrada en los colectores que constituyen los drenajes de las infraestructuras La Figura 6 ilustra graacuteficamente este efecto

Figura 6 Izquierda ejemplo de escorrentiacutea sin infraestructura lineal derecha ejemplo de la misma escorrentiacutea con infraestruc-tura lineal Redibujado a partir de un esquema de Lenore Fahrig (ineacutedito)

Otro efecto bien conocido es la formacioacuten de enchar-camientos debidos a ese mismo lsquoefecto barrerarsquo en este caso maacutes bien lsquoefecto presarsquo que ocasiona la infraestructura al interceptar las liacuteneas de flujo de circulacioacuten hidroloacutegica (tanto superficial como sub-terraacutenea Figura 7)

Carretera

Desaguumle

Escorrentiacutea

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Figura 9 Deslizamientos superficiales del terreno en desmontes de una autopista que desbaratan las actuaciones de revegetacioacuten realizadas sobre ellos (Foto JF Martiacuten Duque)

b Efectosoff-site

Constituyen probablemente las consecuencias maacutes adversas y menos estudiadas y abordadas desde un punto de vista teacutecnico y de investigacioacuten precisa-mente por situarse lsquofuerarsquo del aacutembito de las carre-teras y los ferrocarriles La mayor parte de estos impactos se debe al efecto que tienen las infraes-tructuras lineales interceptando desviando y con-centrando los flujos de escorrentiacutea y sedimentos de su entorno pero tambieacuten procedentes del aacutembito de las propias viacuteas y taludes y emitiendo los mismos de manera concentrada

Un impacto comuacuten sobre el entorno consiste en la formacioacuten de caacutercavas a la salida de los drenajes de las infraestructuras (Figuras 10 y 11) Las principales causas de formacioacuten de estas morfologiacuteas erosivas se deben a la concentracioacuten de flujos superficiales a partir de los sistemas de desaguumle que liberan de manera concentrada el drenaje de cuencas que han incrementado su aacuterea (Montgomery 1994 Nyssen et al 2002) (Figura 10) Pero tambieacuten al evacuar siempre de manera concentrada la escorrentiacutea generada en el interior de las construcciones y su entorno (Figura 11)

La formacioacuten de estas caacutercavas pero tambieacuten la emisioacuten de sedimentos que tiene lugar a partir de ellas afectan de manera negativa a la calidad de los suelos del entorno de las infraestructuras por ate-rramiento de los perfiles de suelo feacutertil en zonas de depoacutesito produciendo una inversioacuten edaacutefica Todo ello supone una merma de su calidad y capacidad agriacutecola forestal y ecoloacutegica

El efecto barrera o presa y el desaguumle repentino de escorrentiacutea a traveacutes de colectores puede dar lu-gar a inundaciones con efectos catastroacuteficos aguas abajo La conjuncioacuten del efecto barrera y de un funcionamiento deficiente de los desaguumles en la carretera M-45 fue una de las hipoacutetesis considera-das en unas inundaciones ocurridas en septiembre de 2008 en el municipio madrilentildeo de Coslada con resultado de una persona muerta y considerables dantildeos econoacutemicos

El caso extremo de estas situaciones tiene lu-gar cuando se produce una rotura de terraplenes que han represado la escorrentiacutea lo que puede de nuevo tener efectos desastrosos A modo de ejemplo en septiembre de 1999 se produjo el desmoronamiento de un tramo de 200 metros de terrapleacuten del ferrocarril Villalba-Aacutevila (entre sus puntos kilomeacutetricos 99 y 100) que actuoacute como presa en un aguacero Ello tuvo graves secuelas

aguas abajo (en la poblacioacuten de El Herradoacuten) e interrumpioacute el traacutefico ferroviario entre Madrid y el noroeste peninsular durante casi un mes Este suceso asiacute como otros similares se describen en detalle en Diacuteez (2003)

Finalmente un impacto claramente adverso consiste en la emisioacuten de escorrentiacutea pero sobre todo de sedimentos a la red fluvial situada en el entorno de las infraestructuras Y es que los sedimentos pro-cedentes del aacutembito de estas construcciones llegan con mucha frecuencia a las redes hidrograacuteficas maacutes cercanas ocasionando un claro impacto sobre los sistemas fluviales (que variacutean su morfologiacutea y dinaacute-mica) y sobre los ecosistemas acuaacuteticos Aunque en Espantildea faltan estudios en este sentido todo parece indicar que las emisiones a los cursos fluviales des-de taludes de carreteras y ferrocarriles pueden supo-ner una de las principales fuentes de sedimentos en muchas cuencas hidrograacuteficas

Figura 10 Formacioacuten de una caacutercava a la salida de una bajante so-bre un terrapleacuten Las cunetas de una autoviacutea interceptan y desviacutean la escorrentiacutea local que finalmente es liberada de manera concen-trada en este punto con el consiguiente efecto erosivo (Foto JF Martiacuten Duque)

Figura 11 Formacioacuten de una caacutercava a la salida de una cuneta que recoge la escorrentiacutea procedente del aacutembito de una autopista (viacuteas y desmontes) (Foto JF Martiacuten Duque)

V LA ADOPCIOacuteN DE SOLUCIONES DESDE ENFOQUES GEOMORFOLOacuteGICOS E HIDROLOacuteGICOS

1 Hacia una integracioacuten ambiental eficiente en las fases de planificacioacuten y disentildeo

Maacutes allaacute de la adopcioacuten de medidas correctoras localizadas estaacute ampliamente demostrado que es en las fases de planificacioacuten y disentildeo donde puede realizarse la mejor integracioacuten ambiental posible de las infraestructuras lineales de transporte Asiacute las cosas si hubiera que realizar una recomendacioacuten general esta consistiriacutea en retomar la praacutectica del lsquoanaacutelisis del lugarrsquo que ha caracterizado a los mejo-res proyectos de ingenieriacutea a lo largo de la historia utilizando precisamente el ingenio humano Y ello frente a la praacutectica dominante que tiende a impo-ner unas soluciones estaacutendar para cualquier esce-nario al margen de las caracteriacutesticas especiacuteficas del territorio

Una correcta integracioacuten de los factores geoloacutegi-cos geomorfoloacutegicos e hidroloacutegicos debe evitar o minimizar la posibilidad de que las infraestructuras

sean afectadas por procesos geoloacutegicos y geomor-foloacutegicos activos (no relacionados con la infraes-tructura) Todo ello mediante un anaacutelisis de peligro-sidad y riesgo (Ayala y Olcina 2002) que ayude a no situar las infraestructuras en lugares inadecuados desde esta perspectiva Y no solo con el objetivo de reducir la probabilidad de peacuterdidas humanas sino con la finalidad de reducir los costes econoacutemi-cos posteriores en obras de defensa y en medidas correctoras

Para ello se deberiacutean identificar y evaluar aacutereas susceptibles de estar sujetas a procesos de ero-sioacuten (Figura 12) deslizamientos terremotos sub-sidenciashellip u otros peligros geoloacutegicos que supon-gan una amenaza seria a las infraestructuras y que por tanto hagan incompatible su ubicacioacuten en esas zonas

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Figura 12 Bloque diagrama idealizado que muestra los dantildeos producidos a la autopista 140 (en el suroeste de Colorado Estados Unidos) en un tramo en el que atraviesa un fondo de valle muy afectado por procesos de piping y erosioacuten en caacutercavas En Parker y Jenne (1967)

de terrenos afectados por mineriacutea de superficie En Nicolau (2003) y en Martiacuten Duque et al (2010) puede encontrarse una siacutentesis de las distintas aproxima-ciones y de la literatura internacional maacutes relevante sobre estos temas Bugosh (2006) describe la que puede considerarse una de las aproximaciones maacutes avanzadas a nivel mundial a este respecto (meacutetodo GeoFluv y software Natural Regrade)

Tanto las bermas de tierra (earth berms) aunque se construyen fundamentalmente para compensar movimientos de tierra y como pantallas acuacutesticas o visuales como las escombreras podriacutean incorporar tambieacuten criterios geomorfoloacutegicos e hidroloacutegicos en su disentildeo y construccioacuten en lugar de centildeirse a unas pocas tipologiacuteas constructivas muy baacutesicas y estan-darizadas a nivel global Todo ello no con un fin exclusivamente visual o esteacutetico sino funcional tra-tando de garantizar la maacutexima integracioacuten ambien-tal y su estabilidad geomorfoloacutegica a largo plazo El libro de Schor y Gray (2007) ofrece un meacutetodo esencialmente visual sobre las posibilidades de di-sentildeo de estas formas del terreno mientras que en Bugosh (2006) se puede encontrar un enfoque maacutes funcional basado en principios de la geomorfologiacutea fluvial

Finalmente si bien es cierto que el proceso de cons-truccioacuten de infraestructuras lineales puede destruir o dantildear elementos geoloacutegicos y geomorfoloacutegicos de intereacutes no es menos cierto que este proceso cons-tructivo puede crear exposiciones y afloramientos de enorme utilidad donde antes no existiacutean No identi-ficar los puntos y lugares de intereacutes geoloacutegico que se generan con frecuencia durante los procesos de construccioacuten de carreteras y ferrocarriles constituye uno de los errores maacutes habituales de esta activi-dad humana El desintereacutes hacia este aspecto suele afectar tambieacuten a las fases de restauracioacuten basadas exclusivamente en muchos casos en tratar de es-tablecer una cubierta vegetal a toda costa lo que puede destruir elementos geoloacutegicos de gran valor educativo cientiacutefico y turiacutestico

En Estados Unidos existe una amplia tradicioacuten en la identificacioacuten y puesta en valor mediante ma-teriales interpretativos (paneles miradores y hasta centros de visitantes) de estructuras y cortes geo-loacutegicos de gran valor que quedan expuestos a partir de la construccioacuten de infraestructuras lineales Uno de los ejemplos maacutes emblemaacuteticos lo constituye el corte geoloacutegico conocido como Sideling Hill Road Cut En este caso las obras de una autopista deja-ron expuesta de manera espectacular la estructura de un sinclinal colgado en una de las alineaciones

montantildeosas de los Apalaches (Figura 13) El valor de esta exposicioacuten es tal que cuenta con un pequentildeo centro de visitantes y con abundante material inter-pretativo ad hoc constituyendo un recurso didaacutectico y turiacutestico indudable

Figura 13 Superior fotografiacutea aeacuterea oblicua del Sideling Hill Road Cut El corte realizado por la autopista permite reconocer la estruc-tura interior de un sinclinal colgado el cual forma la alineacioacuten montantildeosa de la imagen (Foto Maryland Geological Survey 1998) Inferior detalle del corte y de la estructura geoloacutegica desde una plataforma habilitada para su observacioacuten (Foto JF Martiacuten Duque)

En el Reino Unido el corte Claverley Road Cutting estaacute reconocido como patrimonio geoloacutegico rele-vante para el estudio de ambientes fluviales del Triaacutesico (Ellis 1996) Y en Espantildea si bien existen algunos antecedentes de intereacutes lo cierto es que estos auacuten tienen un caraacutecter aislado y que apenas existe tradicioacuten en este sentido Es el caso del lsquoplie-gue Zaleskirsquo recogido incluso en la guiacutea metodo-loacutegica para la elaboracioacuten de estudios de impacto ambiental de carreteras y ferrocarriles (MOPU 1989 paacuteg 117) Un ejemplo sobresaliente lo constituye el trabajo realizado en torno al tuacutenel ordoviacutecico de Ribadesella (perteneciente a la Autoviacutea del Cantaacute-brico) En eacutel la integracioacuten entre el desarrollo de las obras las investigaciones cientiacuteficas y la divul-gacioacuten de la informacioacuten obtenida (con una expo-sicioacuten permanente en el Museo El Carmen de Ri-badesella) constituye un ejemplo modeacutelico (veacutease

Una de las recomendaciones maacutes efectivas para in-tegrar correctamente los factores geomorfoloacutegicos e hidroloacutegicos consiste en garantizar una miacutenima afec-cioacuten a la hidrologiacutea superficial y subterraacutenea a escala de paisaje aumentando siempre en la medida de lo posible la lsquopermeabilidadrsquo de los corredores de las infraestructuras Por ejemplo mediante la cons-truccioacuten del mayor nuacutemero posible de viaductos y drenajes

Dentro de este epiacutegrafe de lsquointegracioacuten ambientalrsquo merecen un comentario especiacutefico las constantes obras de lsquomejorarsquo (ampliar anchura arcenes reducir curvashellip) de carreteras locales muy poco transita-das o que discurren por espacios naturales o rurales remotos Bajo el argumento de garantizar un trans-porte seguro y eficiente lsquoen cualquier lugarrsquo es fre-cuente modificar severamente la topografiacutea local ex-poner sustratos no meteorizados que ocasionan un impacto ecoloacutegico y paisajiacutestico significativo verter derrubios a cauces fluviales y afectar a formaciones geomorfoloacutegicas relevantes o a elementos esencia-les de paisajes rurales valiosos (como vallados cen-tenarios de piedra o aacuterboles) Todo ello origina una peacuterdida del caraacutecter del paisaje en el que se insertan las propias viacuteas y del cual forman parte de manera indisoluble Asiacute se reconoce en la catalogacioacuten de

lsquocarreteras esceacutenicasrsquo en paiacuteses como Estados Uni-dos (scenic byways) o en la consideracioacuten que tie-nen estas viacuteas en la mayoriacutea de los paiacuteses del norte de Europa y de Ameacuterica en los que no cabe hablar de una falta de preocupacioacuten por la seguridad de las personas Su forma de actuar en estos casos podriacutea tomarse como ejemplo muy alejado de demasiadas praacutecticas que ponen de manifiesto una escasiacutesima sensibilidad hacia el territorio que se transforma

Pasando ya a una escala de lsquotaludrsquo se deberiacutean con-siderar las dinaacutemicas geomorfoloacutegica e hidroloacutegica locales desde su anaacutelisis y comprensioacuten como fac-tores esenciales en el disentildeo y construccioacuten de des-montes y terraplenes Ello podriacutea recomendar en la medida de lo posible el remodelado de los taludes variando sus perfiles rectiliacuteneos por otros geomor-foloacutegicamente maacutes estables (de topografiacutea normal-mente compleja) seguacuten dicte el anaacutelisis geomorfo-loacutegico local

Los preacutestamos vertederos y bermas de tierra de-beriacutean merecer un tratamiento especiacutefico dentro de la integracioacuten ambiental de las infraestructuras li-neales Para la restauracioacuten de preacutestamos pueden seguirse en realidad los mismos criterios que rigen las mejores praacutecticas para la restauracioacuten ecoloacutegica

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Gutieacuterrez Marco y Bernaacuterdez 2003) Sin embargo situaciones como la del tuacutenel ordoviacutecico son auacuten muy aisladas en nuestro paiacutes lo que lleva a des-aprovechar con demasiada frecuencia toda una serie de oportunidades educativas cientiacuteficas y tu-riacutesticas que se generan con la apertura de infraes-tructuras lineales

Figura 14 Portada del libro Roadside Geology of Arizona Los libros de esta serie pueden encontrarse faacutecilmente en la mayoriacutea de las aacutereas y zonas de servicio relacionadas con el transporte por carre-tera de Estados Unidos

El coste econoacutemico que supondriacutea la adecuacioacuten de estos espacios podriacutea ser miacutenimo pues en muchos casos bastariacutea con un pequentildeo aparcamiento y un panel explicativo Una recomendacioacuten esencial a la hora de facilitar el acceso a tales lugares y permitir asiacute un posible aprovechamiento lsquoculturalrsquo de estas exposiciones es la de garantizar la seguridad de las personas que puedan examinar los afloramien-tos lo cual deberiacutea ser primordial A modo de co-mentario final sobre la relacioacuten entre las carreteras y los lugares de intereacutes geoloacutegico y geomorfoloacutegi-co merece la pena destacar la iniciativa Roadside

permeables mediante alguno de los muacuteltiples siste-mas existentes (como tubos perforados) o mediante el uso de vegetacioacuten que cumpla la misma funcioacuten lo cual estaacute menos ensayado

Otra praacutectica beneficiosa consiste en aumentar la rugosidad de los desmontes Pero mientras que en demasiados paiacuteses incluido Espantildea auacuten se rei-vindica la construccioacuten de taludes con apariencia lisa que otorguen una (falsa) impresioacuten de lsquobuen acabadorsquo y de un trabajo lsquobien hechorsquo se puede citar que nada menos que en 1978 Wright y otros autores alertaban categoacutericamente sobre esa praacutec-tica perjudicial la cual suele conducir a fallos en el establecimiento de la vegetacioacuten Seguacuten sentildealan Wright et al (1978) las superficies rugosas otorgan una apariencia lsquofearsquo al profano pero favorecen la infiltracioacuten de agua y ayudan a recolectar semillas y nutrientes lo que acelera el establecimiento de la vegetacioacuten y por consiguiente disminuye la emi-sioacuten de aguas y sedimentos a la red de drenaje Un trabajo mucho maacutes reciente (Petersen et al 2004) tambieacuten pone de manifiesto coacutemo los lechos rugo-sos favorecen significativamente el establecimiento de la vegetacioacuten

Este aspecto revela una constante contradiccioacuten o una falta de claridad de objetivos a la hora de aco-meter muchos proyectos de restauracioacuten en los que no estaacute claro desde el principio el aspecto y funcioacuten que debe tener un talud de una infraestructura li-neal Las posturas y enfoques que van desde una aproximacioacuten meramente esteacutetica (proporcionar la maacutes agradable experiencia visual para el conductor) hasta otra maacutes ecoloacutegica como la que se propone en este manual no han logrado una conciliacioacuten En esta discusioacuten no habriacutea que obviar que una mayor funcionalidad ecoloacutegica tiene unas mayores posibili-dades de integracioacuten visual

La reduccioacuten de la escorrentiacutea y el incremento de la infiltracioacuten mediante procesos de descompacta-cioacuten o aumento de la rugosidad aparecen descritos como medidas efectivas en trabajos como Gray y Sotir (1996) o Hogan y Drake (2009)

Otras medidas de lsquosentido comuacutenrsquo pero que la di-naacutemica de las obras puede dificultar consisten en planificar las actividades de construccioacuten y restau-racioacuten en funcioacuten de la meteorologiacutea del lugar de modo que se minimicen los procesos erosivos y en reducir el tiempo de exposicioacuten entre la construc-cioacuten y la restauracioacuten de desmontes y terraplenes de manera que se eviten o minimicen los procesos erosivos (Figura 15)

Figura 15 Erosioacuten hiacutedrica muy severa en terraplenes de una au-toviacutea La paralizacioacuten de las obras impidioacute el extendido de tierra vegetal y la revegetacioacuten durante un largo periodo de tiempo (Foto JF Martiacuten Duque)

3 Correccioacuten de los efectos off-site

La adopcioacuten de un enfoque o aproximacioacuten ecoloacutegi-ca que permita minimizar muchos de los efectos am-bientales maacutes habituales que tiene la construccioacuten de carreteras y ferrocarriles deberiacutea partir de un anaacute-lisis y comprensioacuten de la dinaacutemica geomorfoloacutegica e hidroloacutegica que tiene el territorio sobre el que se impone la infraestructura En el caso de la hidrolo-giacutea las estimaciones de voluacutemenes de escorrentiacutea y de sus caudales punta aunque imprescindibles para disentildear los drenajes deberiacutean completarse con anaacutelisis sobre su capacidad de erosioacuten transporte y sedimentacioacuten Una comprensioacuten y anticipacioacuten de los factores geomorfoloacutegicos e hidroloacutegicos implica-dos evitariacutean muchas de las habituales letaniacuteas de problemas que surgen tras la fase de construccioacuten

Para la correccioacuten de los efectos geomorfoloacutegicos e hidroloacutegicos off-site la experiencia y la literatura destacan los muacuteltiples beneficios que tiene aumen-tar la lsquopermeabilidadrsquo hidroloacutegica y territorial de las infraestructuras (por ejemplo mediante la construc-cioacuten de viaductos) Un caso interesante lo constitu-yen toda una serie de proyectos destinados a mejo-rar la permeabilidad de la autoviacutea AP-7 frente a las avenidas

Se deberiacutea asimismo evitar incrementar excesi-vamente el aacuterea de las cuencas hidrograacuteficas que drenan hacia los distintos colectores que atraviesan las infraestructuras impidiendo en la medida de lo posible la desviacioacuten de escorrentiacutea desde unas cuencas hidrograacuteficas a otras Tambieacuten se deberiacutea limitar la distancia entre los sistemas de cunetas y

Geology Series Esta iniciativa procedente de nue-vo de Estados Unidos consiste en una serie de libros editados para cada estado (Figura 14) en los que se explican e interpretan paisajes actuales y pasados sobre la base de lugares de intereacutes si-tuados lsquoal lado de las carreterasrsquo Las carreteras se convierten asiacute en el elemento estructurante y organizador de los contenidos

2 Correccioacuten de los efectos on-site

A diferencia de la restauracioacuten de otros espacios en los que ha habido una modificacioacuten simultaacutenea del sustrato del suelo y de la vegetacioacuten (por ejemplo mineriacutea) en los taludes de las infraestructuras linea-les no es posible la reconstruccioacuten de una nueva topografiacutea lo cual impone toda una serie de limi-taciones de primer orden a la restauracioacuten En todo caso siacute que es posible efectuar un remodelado y suavizado de los perfiles rectiliacuteneos

Pero lo cierto es que en un contexto lsquoglobalrsquo ape-nas se llevan a cabo variaciones morfoloacutegicas de los taludes disentildeados con criterios geoteacutecnicos de modo que el principal objetivo de la restauracioacuten va dirigido a revegetar las superficies directamente resultantes de la construccioacuten de taludes Todo ello a pesar de que como ya se ha comentado existan demasiados ejemplos de fallos en intentos de re-vegetacioacuten de estos espacios sobre todo en des-montes sobre rocas no consolidadas bajo climas mediterraacuteneos semiaacuteridos

Para prevenir efectos geomorfoloacutegicos e hidroloacutegi-cos severos en los propios taludes de las infra-estructuras lineales la literatura recoge como una buena praacutectica ciertamente esencial evitar la en-trada de escorrentiacutea exterior (run-on) hacia el talud Todo ello mediante medidas como la construccioacuten de cunetas perimetrales efectivas (cut-off drains) Sin embargo una vez que el flujo se concentra en estas cunetas el potencial erosivo resultante de liberar dicha escorrentiacutea (y el de infiltracioacuten si no estaacuten pavimentadas) se incrementa considerable-mente Por este motivo su conduccioacuten hacia el sistema de drenajes y cunetas cuando el disentildeo lo recomiende deberiacutea realizarse mediante los dis-tintos tipos de bajantes que estaacuten disentildeados para disipar la energiacutea

La prevencioacuten de los efectos derivados de la existen-cia de surgencias en los desmontes puede acome-terse desde meacutetodos tradicionales y contrastados tales como drenar de manera controlada los niveles

Lugar de intereacutes geoloacutegico excepcional (cabalga-miento o falla inversa) expuesto como consecuencia de unas obras de ampliacioacuten de la carretera N-110 en el borde norte del Sistema Central (proximidades de la localidad de Villacastiacuten) El material grisaacuteceo situado sobre la liacutenea oblicua (falla) son granitoides del Paleozoico que lsquocabalganrsquo sobre los materiales anaranjados y ocres correspondientes a arenas arcoacutesicas del Cenozoico (Foto Alberto Carrera) En Diacuteez y Martiacuten Duque (2005)

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alcantarillas con el objetivo de reducir la longitud de recorrido de la escorrentiacutea

Otras medidas efectivas consisten en dirigir el desaguumle de los drenajes hacia zonas con una bue-na cubierta vegetal bien existente o bien creada mediante canales revegetados O bien canalizar las emisiones de escorrentiacutea y sedimentos que

atraviesan o proceden de las infraestructuras hasta balsas de decantacioacuten o retencioacuten temporal tanques de tormentas diques de tierra o gaviones o simi-lares a la salida de los drenajes (Figura 16) Op-cionalmente estas estructuras pueden incorporar un desaguumle controlado y gradual de la escorrentiacutea todo ello con el objetivo de laminar picos de avenidas y de evitar posibles roturas o colmataciones raacutepidas

El siguiente caso (descrito en detalle en Diacuteez Herrero et al 2009) puede servir para ilustrar la dicotomiacutea permanente que existe entre una forma convencional de abordar el tratamiento de taludes de carreteras (el ya referido lsquobusiness as usualrsquo) y la existencia de otras posibilidades apenas exploradas que podriacutean conseguir solucionar problemas de manera maacutes efi-ciente y con una mayor integracioacuten ambiental

La carretera SG-312 denominada localmente lsquoCuesta de los Hoyosrsquo consiste en una viacutea de doble carril que bordea la ciudad histoacuterica de Segovia por el suroeste constituyendo una de las principales viacuteas de comunicacioacuten de su entorno Dicha carretera discurre a modo de escaloacuten entre el fondo de un pequentildeo valle (del arroyo Clamores) y una ladera desarrollada sobre rocas carbonaacuteticas

Las obras de construccioacuten de esta carretera y de sus sucesivos arreglos y ensanches han conforma-do un escarpe continuo en uno de las maacutergenes de la viacutea Este escarpe casi vertical ha favorecido la ocurrencia de sucesivos procesos de caiacutedas des-prendimientos vuelcos y colapsos de rocas cuya interferencia con el traacutefico rodado ha sido muy fre-cuente De hecho ha existido aquiacute desde antiguo la caracteriacutestica sentildeal de traacutefico que indica lsquopeligro por desprendimientosrsquo En el antildeo 2003 la circulacioacuten por esta carretera estuvo cortada debido a las obras de estabilizacioacuten de los taludes como consecuencia de dos importantes desprendimientos de rocas ocurri-dos los meses de mayo y agosto de ese mismo antildeo uno de los cuales movilizoacute maacutes de 20 toneladas de rocas Tras ese desprendimiento y cuando apenas habiacutean transcurrido 25 diacuteas de su apertura la carre-tera tuvo que ser cortada de nuevo el 31 de agosto de 2003 tras otro desprendimiento

La solucioacuten de estabilizacioacuten consistioacute en aplicar a todo el cortado rocoso distintos tipos de malla talud (Figura 17) cuyo importe total fue de 900000 euros Si bien la medida correctora puede ser efectiva para pequentildeos desprendimientos no lo es para otros de mayor entidad (puesto que la solucioacuten no logra es-tabilizar grandes bloques inestables como tambieacuten puede verse en la Figura 17) Al mismo tiempo se echa en falta aquiacute un tratamiento maacutes adaptado al entorno tan singular en el que se integra la viacutea con vistas reciacuteprocas entre la carretera y el borde suroeste de la ciudad histoacuterica (que es Patrimonio de la Humanidad desde 1985) La singularidad de

este enclave se completa por la circunstancia de que el talud objeto de tratamiento incluye cuevas apro-vechadas como necroacutepolis que fueron el cemente-rio judiacuteo de la ciudad De hecho la Fiscaliacutea de la Audiencia Provincial de Segovia llegoacute a incoar dili-gencias informativas para tener conocimiento de la posible afeccioacuten al medio ambiente de estas obras Desde nuestro punto de vista una accioacuten lsquocorrec-torarsquo maacutes sensible y ecoloacutegica maacutes particularizada y con un enfoque en el que hubiera predominado la integracioacuten ambiental de la obra en su entorno podriacutea haber propuesto al menos en algunos sec-tores la retirada y desmonte de todos aquellos sec-tores del talud que mostrasen mayor inestabilidad eliminando el riesgo pero dejando al descubierto afloramientos naturales de roca lsquosanarsquo (en la liacutenea de la solucioacuten lsquotalud Royalrsquo que se expondraacute maacutes adelante) En este sentido la exposicioacuten de super-ficies coincidentes con diaclasas existentes habriacutea favorecido un aspecto maacutes lsquoenvejecidorsquo de manera natural del desmonte conservando asiacute el caraacutecter singular de este entorno

Figura 17 Tratamiento con malla-talud efectuado en la Cuesta de Los Hoyos (Segovia) (Foto Andreacutes Diacuteez)

Figura 16 Izquierda ejemplo de una balsa de decantacioacuten de sedimentos y de contencioacuten de vertidos accidentales conectada al sistema de drenaje de la autopista Radial 4 (Madrid) En la imagen pueden observarse ademaacutes de la infraestructura lineal la bajante desde el terrapleacuten la cuneta que conduce la escorrentiacutea y los sedimentos a la balsa el canal de entrada la balsa y el vertedero de la balsa a la red fluvial del entorno (arroyo Salinas) Derecha detalle de la misma balsa en el que se aprecian mejor alguno de los elementos que la componen el canal de entrada la reja de desbaste la balsa el canal de vertido y el arroyo Salinas (al fondo) (Fotos Javier Martiacutenez de Castilla Colomer Ferrovial-Agromaacuten SA)

La literatura especializada propone evitar cons-truir cunetas con un disentildeo convencional con perfil lsquoen Vrsquo y construirlas con fondo plano so-bre todo si no estaacuten pavimentadas ya que las primeras concentran y aceleran el flujo de agua y favorecen la erosioacuten bien en la propia cuneta (si no estaacute cementada) bien cuando se libera la es-correntiacutea hacia fuera del aacutembito de la infraestruc-tura Otras recomendaciones auacuten maacutes completas incluiriacutean disentildear las cunetas sobre la base de principios de la geomorfologiacutea fluvial (Bugosh

2006) y utilizar pavimentos permeables siempre previendo sus posibles efectos

Como siacutentesis podriacutea decirse que habriacutea que reducir al maacuteximo posible la intercepcioacuten concentracioacuten y desviacioacuten de la escorrentiacutea producida por la cons-truccioacuten de carreteras Ademaacutes la escorrentiacutea eva-cuada deberiacutea distribuirse espacial y temporalmente buscando siempre incrementar la infiltracioacuten y evi-tando dirigir los desaguumles hacia laderas sin protec-cioacuten frente a la erosioacuten hiacutedrica

VI UN EJEMPLO ILUSTRATIVO LAS LIMITACIONES DE LAS SOLUCIONES lsquoESTAacuteNDARrsquo

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La confirmacioacuten del fracaso de una solucioacuten que no estaacute adaptada a paliar la causa del problema se ha puesto de manifiesto con la ocurrencia de nuevos desprendimientos recientes ocurridos el 22 de no-viembre de 2010 que han motivado un nuevo cierre de la viacutea

Muy cerca de la citada carretera SG-312 aparece otro ejemplo de lsquoestabilizacioacutenrsquo de un escarpe rocoso que ilustra incluso mucho maacutes claramente que el ante-rior la dificultad para adoptar otro tipo de solucio-nes que no sean las rutinarias

En este caso se trata de unos cantiles rocosos de la misma naturaleza que los recieacuten descritos que a modo de anfiteatro natural circundan el Santuario de La Fuencisla (denominadas Pentildeas Grajeras) tam-bieacuten en el entorno de la ciudad histoacuterica de Segovia Estos escarpes han sufrido al menos cinco despren-dimientos de gran entidad en los uacuteltimos 500 antildeos (Diacuteez Herrero et al 2009) lo que indica un periodo de retorno de un evento de gran magnitud de en torno a 100 antildeos El suceso maacutes reciente tuvo lugar la madrugada del 7 de abril de 2005 cuando al me-nos dos mil toneladas de roca se desprendieron de las Pentildeas Grajeras destruyendo el edificio anexo al Santuario de la Fuencisla e hiriendo a tres religiosas que se encontraban dentro

Dentro de estas mismas Pentildeas Grajeras toda una serie de desprendimientos de menor entidad afectan tambieacuten de modo recurrente a la carretera que dis-curre a su pie (carretera SG-310 o carretera de Areacute-valo) Asiacute unos pocos diacuteas despueacutes del suceso del 7 de abril de 2005 se produjo un nuevo desprendi-miento de rocas en una zona muy proacutexima En este caso las rocas caiacutedas alcanzaron a un vehiacuteculo que pasaba por la carretera en ese momento Con poste-rioridad otros desprendimientos (ocurridos el 13 de mayo de 2008 y el 20 de julio de 2008) obligaron de nuevo a cortar algunas zonas a la circulacioacuten de personas y vehiacuteculos

En este caso se puede ser auacuten mucho maacutes criacutetico con la actuacioacuten de estabilizacioacuten y restauracioacuten que se produjo sobre las Pentildeas Grajeras con poste-rioridad al gran desprendimiento del 7 de abril de 2005 Tras el desprendimiento un gran bloque que-doacute semisuspendido separado del macizo rocoso

Tabla 1 Efectos de las diferentes soluciones teacutecnicas de actuacioacuten en Pentildeas Grajeras (Segovia)

EFECTOS QUE HUBIERA TENIDO DESMONTAR EL GRAN BLOQUE INESTABLE

EFECTOS DE LA INTERVENCIOacuteN REALIZADA BULONADO + GUNITA

Apariencia natural manteniendo la calidad visual Hubiera quedado un escarpe rocoso poco meteorizado que se habriacutea integrado progresivamente en el conjunto del cortado

Peacuterdida de valores esteacuteticos Aspecto artificial de ldquocualquier desmonte de carreterardquo en un entorno de calidad visual muy alta

Hubiera mantenido intactos los valores que hacen de esta localizacioacuten un enclave singular

La singularidad del enclave se mantiene pero se produce una peacuterdida clara del caraacutecter del lugar

Se habriacutean mantenido los procesos geomorfoloacutegicos hidroloacutegicos y ecoloacutegicos (mantenimiento del haacutebitat natural para distintas especies rupiacutecolas y de la biodiversidadhellip)

No mantiene los procesos geomorfoloacutegicos hidroloacutegicos y ecoloacutegicos Sistema artificial sin flujos naturales ni haacutebitats (gunitado)

Hubiera sido una solucioacuten resiliente y estable No es una solucioacuten ni resiliente ni estable

No hubiera requerido mantenimiento (mucha mayor estabilidad) Maacutes barato

Requiere mantenimiento (el problema queda lsquocongeladorsquo) Maacutes caro

VII EJEMPLOS DE EacuteXITO (O DE COacuteMO SERAacute EL FUTURO)

por una grieta de 6 cm de anchura y de 15 m de longitud con riesgo de afectar al Santuario Tras esa alarma se produjo una intervencioacuten inmediata que lsquobulonoacutersquo el bloque inestable al macizo rocoso realizaacutendose con posterioridad un tratamiento con mortero proyectado (gunitado) En nuestra opinioacuten hubiera sido mucho maacutes conveniente proceder a desmontar el gran bloque inestable lo que hubiera garantizado una gran estabilidad de la zona duran-te muchos antildeos Y hubiera permitido el afloramien-to de roca natural asegurando el mantenimiento de la calidad ecoloacutegica y visual del lugar Como miacute-nimo esta posibilidad deberiacutea haberse contempla-do como alternativa dada su viabilidad y dado que los requerimientos teacutecnicos (instalacioacuten de gruacutea) y de riesgo asumido eran similares en los dos casos Sin embargo en su lugar se procedioacute a realizar una actuacioacuten lsquoconvencionalrsquo (Figura 18) como las que se aplican en cualquier talud de carretera en un entorno de gran valor natural histoacuterico y religioso y sin duda en el paisaje maacutes sobresaliente del entorno de la ciudad de Segovia No en vano esta zona forma parte de las vistas panoraacutemicas de ma-yor calidad que se obtienen desde el mirador del Alcaacutezar vistas que se encuentran protegidas por una normativa pionera en nuestro paiacutes (del antildeo 1941) a este respecto La Tabla 1 trata de compa-rar los efectos que hubiera tenido la alternativa de desmontar el bloque inestable con respecto a la solucioacuten finalmente adoptada

Figura 18 Detalle del bulonado y gunitado elegido como solucioacuten teacutecnica para la fijacioacuten de la placa de roca contigua a la zona des-prendida (Foto Andreacutes Diacuteez)

El hecho de que la praacutectica totalidad de los taludes de infraestructuras lineales se construyan actualmente si-guiendo casi siempre los mismos meacutetodos no quiere decir que no existan ya otras propuestas y realidades que constituyen ejemplos exitosos que apuntan hacia otra manera de hacer las cosas Estas experiencias auacuten muy minoritarias y tildadas de lsquopoco realistasrsquo o lsquomuy carasrsquo (lo cual contraargumentaremos) muestran lo que seraacuten probablemente los procedimientos de disentildeo y construccioacuten de la mayor parte de los taludes de infraestructuras lineales en el futuro

1 Maacutexima estabilidad e integracioacuten ambiental de desmontes rocosos el talud Royalreg

La praacutectica constructiva actual de desmontes de in-fraestructuras lineales sobre macizos rocosos puede considerarse bastante lsquotraumaacuteticarsquo para el paisaje afec-tado dado que lsquobiselarsquo por igual todo tipo de rocas y formas del terreno Los nuevos desmontes suelen tener un gran impacto visual y ecoloacutegico al tiempo que son fuente de todo tipo de inestabilidades Fren-te a esta manera ndashcasi uacutenicandash de observar la realidad de estos espacios el talud Royalreg (httpwwwgenie-geologiquefr) creado y patentado por el geoacutelogo franceacutes Paul Royal propone un meacutetodo que consigue

simultaacuteneamente otorgar la maacutexima estabilidad a los desmontes rocosos de infraestructuras lineales y con-seguir una extraordinaria integracioacuten visual y ecoloacutegica

El meacutetodo consiste en analizar la evolucioacuten geomor-foloacutegica que sufren las mismas rocas objeto de corte en laderas de paisajes del entorno que se consideran referentes e lsquoimprimirrsquo a los desmontes construidos dicha evolucioacuten desde el principio En el fondo el razonamiento es simple y realiza la si-guiente interpretacioacuten si se construyera un desmon-te rocoso sobre una localizacioacuten determinada y no se interviniera sobre eacutel (estabilizaacutendolo) durante un periodo de tiempo largo este sufririacutea una evolucioacuten geomorfoloacutegica La interpretacioacuten de esa evolucioacuten no es imposible sino perfectamente factible a partir del anaacutelisis de los referentes ya citados Sobre esta base la solucioacuten Royal lsquocomprimersquo esa evolucioacuten durante la fase constructiva y otorga al desmonte rocoso desde el principio la evolucioacuten que sufririacutea a lo largo de un periodo de tiempo dilatado El re-sultado es un talud muy estable visualmente muy atractivo y con las maacuteximas ventajas ecoloacutegicas

En siacutentesis el meacutetodo consiste en a) identificar las principales liacuteneas de discontinuidad del macizo rocoso (fallas diaclasas planos de estratificacioacuten planos de esquistosidadhellip) las cuales determinan

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la inestabilidad b) comprender los patrones de esa inestabilidad como tipo de proceso (caiacutedas o desli-zamientoshellip) y condiciones de ocurrencia c) conocer cuaacutel es la respuesta diferencial (erosiva o evolutiva) de las distintas rocas que componen un talud (por ejemplo una roca masiva puede soportar un talud vertical pero un estrato de una roca sedimentaria intercalada no) e incorporar dicha respuesta en el disentildeo

Los taludes Royal se construyen a partir de vola-duras muy dirigidas o controladas (adaptadas a la estructura de los distintos tipos de rocas) Este pro-ceso se completa mediante el desmonte particulari-zado de bloques inestables con retroexcavadora y tambieacuten de manera manual (Figura 19) El enfoque convencional interpreta que el procedimiento Royal es lsquomucho maacutes carorsquo que los meacutetodos actuales de construir desmontes pero desde aquiacute nos atrevemos a afirmar que este meacutetodo es lsquomucho maacutes baratorsquo si consideramos el ahorro que se genera con el meacuteto-do Royal tanto en costes de medidas correctoras de tipo estructural (cunetas bulones mallas empleo de gunitahellip) como en costes de mantenimiento al que estaacuten sujetos la mayoriacutea de los taludes rocosos que son afectados por infraestructuras lineales (veacutea-se a este respecto el ejemplo descrito en el apartado VI de este capiacutetulo)

Figura 19 Aspecto de un talud Royal en construccioacuten en el que se estaacuten eliminando los uacuteltimos bloques inestables de forma manual Carretera RN57 en Luxeuil Francia (Foto Paul Royal)

Como ya se ha indicado ademaacutes del beneficio eco-noacutemico a largo plazo los taludes Royal ofrecen enor-mes ventajas paisajiacutesticas y ecoloacutegicas

1 Constituyen teselas de paisaje visualmente atrac-tivas perfectamente integradas en el entorno Ello es asiacute porque ofrecen una configuracioacuten geomorfoloacutegica que es convergente (lsquonaturalrsquo coherente) con la del entorno (Figura 20) Tam-bieacuten y este destalle es esencial porque al dejar

al descubierto las discontinuidades naturales de la roca estas ya tienen un determinado grado de meteorizacioacuten lo que consigue el admirable ob-jetivo de construir un talud nuevo que ya parece lsquomuy viejorsquo por estar meteorizado (Figura 21)

Figura 20 Aspecto de un talud Royal en la carretera A20 Cahors (Francia) (Foto Paul Royal)

Figura 21 Aspecto de un talud Royal en la carretera RD 105 Loire (Francia) en el que se observa la exposicioacuten de superficies ya meteorizadas en un desmonte de reciente construccioacuten (Foto Paul Royal)

2 Se logra establecer una continuidad entre la geo-logiacutea y la geomorfologiacutea (es decir la estructura del paisaje) del entorno y los desmontes cons-truidos al evitar contactos bruscos y artificiales entre ambos sistemas

3 La configuracioacuten del desmonte ofrece las mayores ventajas ecoloacutegicas posibles al no incluir elemen-tos artificiales A su vez se maximiza la superficie total expuesta dado que son taludes lsquotridimen-sionalesrsquo que incrementan considerablemente su superficie final Auacuten maacutes como existen distintas orientaciones y pendientes se construye la base

para la existencia de una gran diversidad de haacutebi-tats Finalmente dada la ausencia de elementos artificiales y su gran estabilidad su colonizacioacuten natural por distintas especies de flora y fauna es raacutepida y espontaacutenea

El meacutetodo Royal cuenta con una ampliacutesima gama de ejemplos construidos en Francia (accesibles a traveacutes de httpwwwgeniegeologiquefr) y a fecha de 2010 con dos ejemplos en Cataluntildea carretera C-16 DrsquoAbrera a Bellver de Cerdanya y carretera C-15 en el tramo de Vilanova i la Gel-truacute ndash Vilafranca del Penedeacutes (Figura 22) Estos ejemplos son el resultado de iniciativas de gran intereacutes que llevan antildeos buscando las mejores soluciones disponibles para minimizar el impacto de las infraestructuras viarias sobre el territorio (EGAM SL 2000)

Figura 22 Aspecto de un talud Royal en construccioacuten en una autopista que atraviesa el macizo del Garraf (Cataluntildea) La Declaracioacuten de Impacto Ambiental de esta autopista puso como condicioacuten la construccioacuten de este tipo de talud en esta zona Noacutetese coacutemo las rocas de la izquierda de la imagen rocas de falla maacutes erosionables) son remodeladas formando ya una pequentildea depresioacuten en el desmonte alcanzando desde el principio la que seraacute su maacutes que previsible evolucioacuten tal y como ocurre en las laderas lsquonaturalesrsquo del entorno (Foto JF Martiacuten Duque)

2 A la buacutesqueda de la maacutexima estabilidad e integracioacuten ambiental de desmontes sobre rocas no consolidadas remodelados topograacuteficos y aumento de la estabilidad fiacutesica del sustrato

La construccioacuten de desmontes sobre rocas no con-solidadas (rocas lsquoblandasrsquo) no cuenta con un meacuteto-do de disentildeo y construccioacuten tan soacutelido y coherente como el talud Royal si bien existen iniciativas que apuntan en esa direccioacuten

En primer lugar el Departamento de Transportes del estado de California en Estados Unidos (Caltrans) sobre la base de la aproximacioacuten de Schor y Gray (2007) estaacute disentildeando y construyendo desmontes a partir de remodelados geomorfoloacutegicos que buscan una mayor estabilidad e integracioacuten ambiental en el entorno (Figura 23)

Figura 23 Comparativa entre un remodelado rectiliacuteneo del terreno y otro que se adapta a las formas del paisaje en el entorno de una infrae-structura lineal El segundo aumenta la superficie afectada pero puede tener seguacuten el escenario mayores ventajas en teacuterminos de estabilidad e integracioacuten ambiental Imagen accesible a traveacutes de httpwwwdotcagovhqLandArchecearthworkcontour_grading_roundinghtm

Como ya se ha sentildealado a lo largo de todo el ca-piacutetulo en los desmontes de rocas no consolidadas construidos en ambientes semiaacuteridos la erosioacuten hiacutedrica constituye un problema central que de-termina la estabilidad de los desmontes y el eacutexito de las restauraciones En este sentido ademaacutes de consolidar y articular como meacutetodo las posibilida-des de remodelados topograacuteficos sobre la base de los ejemplos expuestos un equipo de inves-tigacioacuten formado por personal de las Facultades de Geologiacutea y Biologiacutea de la Universidad Complu-tense de Madrid (UCM) y del servicio de I+D+i de la empresa constructora Obrascoacuten Huarte Laiacuten SA (OHL) estaacute desarrollando soluciones para reducir la erosioacuten hiacutedrica en estos escenarios mediante el manejo de procesos que intervienen en las pro-piedades fiacutesicas de los sustratos de los desmon-tes (descompactacioacuten aumento de la rugosidad estudio de la organizacioacuten microtopograacutefica de la escorrentiacutea y posibilidades de control de la mis-ma sin elementos estructuraleshellip) (Barbero et al 2009a 2009b)

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IacuteNDICE

VIII HACIA UN CAMBIO DE PARADIGMA

1 Imponer la infraestructura al territorio en lugar de adaptarla o integrarla en el mismo en la medida que los condicionantes teacutecnicos y eco-noacutemicos de cada proyecto lo permitan

2 Realizar obras en carreteras que discurren por paisajes rurales y naturales de gran valor eco-loacutegico y paisajiacutestico que bien son innecesarias bien se realizan desde una perspectiva que no considera el caraacutecter del territorio transformado Para evitar estos errores se podriacutea adoptar el enfoque que tienen para este tipo de viacuteas los paiacuteses del norte de Europa y de Norteameacuterica

3 Aplicar soluciones estaacutendar para estabilizar ta-ludes sin considerar la calidad o fragilidad del entorno en el que se realiza dicha actuacioacuten

4 No identificar conservar habilitar y promover la divulgacioacuten e interpretacioacuten de puntos luga-res y estructuras singulares de intereacutes geoloacute-gico y geomorfoloacutegico que quedan expuestos con frecuencia como consecuencia de la cons-truccioacuten de infraestructuras lineales

5 No considerar la erosioacuten hiacutedrica como un factor de inestabilidad de primer orden en taludes que tienen materiales no compactados y no incluir por tanto dicho factor en el disentildeo de los taludes

6 No prever los efectos que tendraacuten los lsquocortesrsquo realizados en el terreno en los procesos de construccioacuten de infraestructuras sobre posi-bles niveles permeables y saturados del sub-suelo ni las consecuencias que se derivaraacuten sobre la inestabilidad de los taludes

7 No considerar el efecto que introduce la varia-bilidad litoloacutegica dentro de un mismo talud a la hora de abordar su estabilizacioacuten o restau-racioacuten

8 Realizar plantaciones de arbustos y matorrales en desmontes muy susceptibles a la erosioacuten hiacutedrica lo que no consigue reducir la erosioacuten sino al contrario la favorece debido al descen-so del nivel de base local que introducen en el talud los procesos de ahoyado

Las consideraciones y ejemplos descritos tratan de ilustrar el necesario cambio de paradigma que deberiacutea ocurrir con respecto al manejo y control de la dinaacutemica geomorfoloacutegica e hidroloacutegica en el entorno de las infraestructuras lineales Ese cambio deberiacutea afectar a todas las fases disentildeo construccioacuten medias correctoras y de restaura-cioacuten y requeririacutea tratar de lsquomanejarrsquo y controlar las dinaacutemicas geomorfoloacutegica e hidroloacutegica de forma maacutes adaptativa y no basada exclusivamente en medidas estructurales convencionales Ello permi-tiriacutea lograr soluciones que combinen de manera maacutes eficiente seguridad y beneficios ambientales y econoacutemicos

A modo de ejemplo la adopcioacuten de enfoques maacutes lsquoadaptativosrsquo en taludes sobre rocas no consolida-das en ambientes mediterraacuteneos semiaacuteridos podriacutea incrementar significativamente el eacutexito de los pro-cesos de revegetacioacuten y de restauracioacuten ecoloacutegica y disminuir los costes de mantenimiento La principal mejora derivada de tratar de comprender y manejar esos procesos geomorfoloacutegicos e hidroloacutegicos des-de un enfoque ecoloacutegico se debe a la reduccioacuten en

la merma de bienes y servicios ambientales en el entorno de las infraestructuras Se podriacutea conseguir asiacute disminuir las peacuterdidas de suelo por distintos procesos erosivos (en algunos casos severos tales como formacioacuten de barrancos y caacutercavas) asiacute como por fenoacutemenos de sedimentacioacuten (por ejemplo en forma de conos aluviales) Todo ello impediriacutea a su vez la peacuterdida de suelos productivos desde un punto de vista agriacutecola forestal y ecoloacutegico Y se reduciriacutean al miacutenimo las emisiones de sedimentos a las redes fluviales proacuteximas un problema ambiental muy serio que pasa inadvertido en Espantildea

Respecto a los desmontes rocosos el meacutetodo del talud Royal sintetiza de manera magistral el enfoque adaptativo y el cambio de paradigma que aquiacute se defiende

Prestar atencioacuten al intereacutes cientiacutefico educativo y turiacutestico de determinadas exposiciones (afloramien-tos) generadas por la apertura de infraestructuras lineales podriacutea completar un abanico de medidas encaminadas a incrementar la integracioacuten ambiental de las infraestructuras lineales en su entorno

IX PREGUNTAS CLAVE

iquestCoacutemosepuedecumplirlamejorintegracioacutengeomorfoloacutegicaehidroloacutegicaposibledelainfraestructura(formulacioacutendedistintasalternativasodisentildeodelaalternativafinal)

Realizar anaacutelisis geoloacutegicos geomorfoloacutegicos e hidroloacutegicos regionales y a escala de paisaje que permitan adaptar la infraestructura al territorio minimizando los riesgos naturales y los impactos

iquestCoacutemosepuedemaximizarlalsquopermeabilidadrsquohidroloacutegicadelainfraestructurasobreelterritoriominimizandosuslsquoefectosbarrerarsquo

Explorar todas las posibilidades de disentildeo y cons-truccioacuten que sean maacutes eficientes a la hora de fa-vorecer la conectividad hidroloacutegica a ambos lados de la infraestructura (viaductos drenajeshellip)

iquestEsviableteacutecnicayeconoacutemicamentemodificarlosperfilestopograacuteficosrectiliacuteneosdelostaludesporotrosgeomorfoloacutegicamentemaacutesestablesenesaslocalizaciones

Evaluar la posibilidad de introducir variaciones a los disentildeos de taludes rectiliacuteneos si se estima que otras morfologiacuteas teacutecnica y econoacutemicamente via-bles son maacutes estables en el largo plazo

iquestCuaacutelessonlosfactoresabioacuteticosquelimitanlaestabilidadgeomorfoloacutegicadelostaludesobjetodeactuacioacutenasiacutecomoelestablecimientoydesarrollodesuelosyvegetacioacuteniquestCoacutemosepuedenlsquomanejarrsquodemaneraexpertaydesdeunenfoqueecoloacutegicodichosfactores

Realizar un anaacutelisis de esos factores a escala lo-cal y utilizar la experiencia acumulada por el esta-do del conocimiento actual para su manejo desde una oacuteptica ecoloacutegica En funcioacuten de las condicio-nes climaacuteticas y particulares ese manejo puede ir dirigido a aumentar la infiltracioacuten de agua (a partir de medidas como el aumento de la rugosi-dad o la descompactacioacuten) para evitar la erosioacuten hiacutedrica o a todo lo contrario es decir a favorecer el drenaje para evitar una saturacioacuten del subsue-lo que provoque movimientos gravitacionales

X ERRORES HABITUALES

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Ecohidrologiacutea erosioacuten hiacutedrica y dinaacutemica de la vegetacioacuten en laderas artificiales

Joseacute Manuel Nicolau Tiscar Espigares Mariano Moreno de las Heras y Luis Merino-Martiacuten

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CAPIacuteTULO 3 Ecohidrologiacutea erosioacuten hiacutedrica y dinaacutemica de la vegetacioacuten en laderas artificiales

Joseacute Manuel Nicolau Tiscar Espigares Mariano Moreno de las Heras y Luis Merino-Martiacuten

I INTRODUCCIOacuteN

Como se ha sentildealado en varios apartados de este manual la inestabilidad geomorfoloacutegica tiene efec-tos negativos sobre el eacutexito de la restauracioacuten de las laderas construidas (on site effects) En efecto la erosioacuten hiacutedrica condiciona los procesos ecoloacutegicos que conducen al establecimiento y desarrollo de la vegetacioacuten asiacute como a la edafogeacutenesis (Kapolka y Dollhopf 2001 Nicolau 2002) Se ha indicado que el aacutembito clave para conseguir una restauracioacuten efec-tiva es el suelo de manera que seguacuten Bradshaw (1988) el objetivo de una restauracioacuten deberiacutea ser alcanzar un suelo bioloacutegicamente funcional Sin em-bargo Whisenant et al (1995) advierten de que en muchos casos es un objetivo previo garantizar la estabilidad de los recursos edaacuteficos que son ame-nazados por los procesos erosivos Los mecanis-mos por los cuales la erosioacuten hiacutedrica afecta a los procesos ecoloacutegicos han sido abordados desde la joven disciplina de la ecohidrologiacutea A continuacioacuten se presenta una siacutentesis de los resultados obteni-dos en este campo por el grupo de investigacioacuten de la Universidad de Alcalaacute-Universidad de Zaragoza Estas investigaciones se han efectuado sobre lade-ras derivadas de la restauracioacuten de la mineriacutea de carboacuten a cielo abierto en el ambiente mediterraacuteneo-continental de Teruel Su intereacutes para el caso de las infraestructuras lineales se refiere a la restauracioacuten de los terraplenes pues se trata de materiales ver-tidos aloacutectonos a diferencia de los desmontes de materiales autoacutectonos

Las interacciones entre la escorrentiacutea superficial y diversos procesos ecoloacutegicos han podido ser abor-dadas en el Aacuterea Experimental El Moral (Utrillas Teruel) gracias a la existencia de un conjunto de la-deras construidas de la misma edad y similares ca-racteriacutesticas topograacuteficas edaacuteficas de orientacioacuten y de tratamientos de revegetacioacuten pero diferencia-das por el volumen de escorrentiacutea generado en su cabecera el cual se introduce en ellas circulando ladera abajo (run-on) Ello representa en condicio-nes de campo lo maacutes cercano a un disentildeo experi-mental dirigido a evaluar el efecto del volumen de escorrentiacutea y la erosioacuten hiacutedrica asociada sobre la dinaacutemica de la vegetacioacuten De hecho la entrada de escorrentiacuteas exoacutegenas por la cabecera de las laderas constituye una singularidad de estos sis-temas emergentes que condiciona notablemente

su evolucioacuten ecoloacutegica Estas entradas (run-on) se generan a causa del incorrecto funcionamiento de cunetas superiores o bermas o de la existencia de segmentos superiores de ladera abruptos o con-vexos que actuacutean como aacutereas-fuente de escorrentiacutea La inestabilidad que generan aconseja el maacuteximo control sobre ellas en los proyectos de restauracioacuten (Hancock y Willgoose 2004)

En las laderas artificiales la accioacuten de la escorrentiacutea superficial ndashmovilizando partiacuteculas de suelo y gene-rando geoformas que modifican la microtopografiacuteandashes un fenoacutemeno generalmente previo en el tiempo a la siembra o llegada de propaacutegulos germinacioacuten y establecimiento de la vegetacioacuten Y probablemente es un proceso tambieacuten maacutes dinaacutemico en las prime-ras etapas de la evolucioacuten de los terraplenes

II EVOLUCIOacuteN ECOLOacuteGICA E HIDROLOacuteGICA DE LADERAS ARTIFICIALES

A modo general se han identificado tres tipos de trayectorias de evolucioacuten ecoloacutegica e hidroloacutegica (Moreno de las Heras 2009a Merino-Martiacuten et al 2011) como se indica en la Figura 1 a) laderas con densas redes de regueros continuos en las que la sucesioacuten ecoloacutegica se encuentra bloqueada (arres-ted succession) presentando una escasa implanta-cioacuten vegetal (Figura 1A) b) laderas con regueros dis-continuos y geoformas de sedimentacioacuten en conos y de erosioacuten en interregueros que han desarrollado comunidades vegetales herbaacuteceas cuya distribucioacuten espacial en manchas discontinuas (lsquoclaros y matasrsquo) estaacute asociada a las aacutereas exportadoras e importa-doras de escorrentiacutea y sedimentos (Figuras 1B y 1C) c) laderas sin geoformas previas asociadas a proce-sos de erosioacuten-sedimentacioacuten en las que se produce el establecimiento de matorrales facilitadores (que interaccionan positivamente con otras especies fa-voreciendo su establecimiento y desarrollo) los cua-les controlan el flujo de agua y sedimentos (Figura 1D) Como se sentildeala en la Figura 1 estos tres tipos

de laderas restauradas representan a su vez un gradiente desde el control abioacutetico de los recursos hiacutedricos (por los procesos geomorfoloacutegicos en las laderas tipo A y B) al control bioacutetico que se produce en aquellas laderas colonizadas por matorrales faci-litadores (tipo C)

Para las condiciones de las laderas de El Moral se ha podido establecer que con niveles de cubierta vege-tal inferiores al 30 y tasas de erosioacuten en regueros superiores a 20 t ha-1 antildeo-1 la dinaacutemica del sistema conduciriacutea a un bloqueo de la sucesioacuten ecoloacutegica Con niveles superiores al 50 de cobertura vegetal y tasas de erosioacuten en regueros inferiores a 5 t ha-1 antildeo-1 la dinaacutemica del sistema conduciriacutea hacia una cubierta vegetal continua a partir de la matorraliza-cioacuten En los niveles intermedios (5-20 t ha-1 antildeo-1 y 30-50 de cobertura vegetal) se organiza una cu-bierta vegetal discontinua en un patroacuten de matas y claros subordinado a la dinaacutemica de la escorrentiacutea superficial (Moreno de las Heras 2009a)

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III FUNCIONAMIENTO ECOHIDROLOacuteGICO DE LADERAS DE ESTUDIO

En el caso de las laderas reguerizadas (Figura 2) ha podido establecerse que el principal efecto restric-tivo de la erosioacuten sobre la vegetacioacuten es la dismi-nucioacuten del contenido de humedad edaacutefica a que da lugar la evacuacioacuten eficiente de la escorrentiacutea por parte de los regueros (Moreno de las Heras et al 2011) La intensificacioacuten del deacuteficit hiacutedrico propiciada por la erosioacuten en regueros condiciona notablemente la escasa colonizacioacuten vegetal En concreto se ha comprobado que limita la germinacioacuten de las semi-llas el establecimiento y supervivencia de plaacutentulas y la produccioacuten de semillas de las plantas adultas (Espigares et al 2011)

Los regueros ademaacutes redistribuyen el agua en la la-dera (concentrando la humedad del suelo en la base de los regueros) lo que afecta tambieacuten a la distribu-cioacuten espacial de las plantas Asiacute en las laderas mi-neras de Teruel a partir de densidades de regueros de 060 m m-2 solo una comunidad pauciespeciacutefica de Medicago sativa (alfalfa originariamente introducida en las laderas mediante revegetacioacuten) es capaz de desa-rrollarse concentraacutendose los individuos en los bordes entre los interregueros y los regueros La localizacioacuten espacial de estos individuos no es casual sino que responde a la interaccioacuten entre los patrones de enve-jecimiento y muerte de las plantas con la distribucioacuten espacial de la humedad y los efectos mecaacutenicos de los

flujos de escorrentiacutea En este sentido los bordes entre los regueros y los interregueros representan las aacutereas donde estas plantas pueden minimizar los niveles de estreacutes hiacutedrico (gracias al uso de los recursos hiacutedricos presentes en el entorno de la base de los regueros) evitando a la vez el fuerte impacto mecaacutenico generado por los flujos concentrados de escorrentiacutea que circulan por los regueros Cabe sentildealar que este tipo de pa-troacuten espacial de la vegetacioacuten (dispuesto en pequentildeas manchas paralelas a los flujos de escorrentiacutea) presenta

una gran incapacidad para interceptar y redistribuir los flujos de recursos (agua nutrienteshellip) que circulan por las laderas En estas condiciones las peacuterdidas direc-tas de recursos hiacutedricos de las laderas en forma de escorrentiacutea superficial representan maacutes del 20 de la precipitacioacuten anual (Moreno de las Heras et al 2010)

En laderas con voluacutemenes intermedios de escorrentiacutea (Figura 3) la disponibilidad de agua en el suelo estaacute asociada a distintos microambientes geomorfoloacutegicos que funcionan como fuentes y sumideros de escorren-tiacutea y sedimentos La presencia de las especies vegeta-les y su distribucioacuten espacial responden a dicha oferta de agua con gramiacuteneas sembradas (Lolium perenne) o establecidas mediante procesos de colonizacioacuten natu-ral (Brachypodium sp) formando manchas densamen-te vegetadas en derramaderos de escorrentiacutea (run-off splays) Estos microambientes se encuentran asociados a microterrazas asiacute como a conos de sedimentacioacuten presentes en las discontinuidades de las redes de re-gueros En estas aacutereas con mayor disponibilidad de re-curso hiacutedrico se ven favorecidas la riqueza de especies y la cubierta vegetal asiacute como la riqueza y abundancia del banco de semillas del suelo lo que incrementa a su vez las posibilidades de germinacioacuten de las se-millas El aporte de agua desde los claros o zonas desprovistas de vegetacioacuten a las manchas de vege-tacioacuten resulta decisiva para ello (Merino Martiacuten 2010) En efecto se han identificado geoformas exportadores de agua colonizadas por individuos de Santolina sp e importadoras cubiertas por Lolium sp remanente de la siembra inicial del tratamiento de revegetacioacuten

Figura 3 Ladera con un patroacuten de manchas de vegetacioacuten estable-cidas en geoformas exportadoras (Santolina sp de flor amarilla) o importadoras (Lolium sp) de agua La distinta oferta hiacutedrica de las geoformas condiciona el patroacuten espacial de la vegetacioacuten Las flechas indican el flujo de agua desde las zonas exportadoras de Santolina sp hacia las importadoras de Lolium sp (dentro de los ciacuterculos) Noacutetese la ceja superior en la ladera que ejerce como aacuterea exportadora de escorrentiacutea hacia el conjunto de la ladera

En las laderas con voluacutemenes limitados de esco-rrentiacutea (que no reciben flujos externos Figura 4) la distribucioacuten espacial de la vegetacioacuten no estaacute asociada a geoformas derivadas de procesos de erosioacuten-sedimentacioacuten y es la misma vegetacioacuten la que controla el flujo del agua superficial y la distri-bucioacuten de la humedad Se pasa pues de un con-trol geomorfoloacutegico sobre el agua a otro bioloacutegico En las primeras etapas de la sucesioacuten ecoloacutegica se establece una formacioacuten de matorral disconti-nuo constituida principalmente por individuos de Genista scorpius (aliaga) Los individuos de esta especie pueden actuar como isla de actividad bio-loacutegica potenciada hidroloacutegicamente Por un lado mejoran sustancialmente las condiciones ambien-tales de su entorno (aportando sombra y aumen-tando el contenido de nutrientes) y por otro son capaces de interceptar el agua que circula en forma de escorrentiacutea superficial procedente de otras aacutereas desprovistas de vegetacioacuten debido al incremento en la tasa de infiltracioacuten del suelo bajo su dosel Asiacute los individuos de esta especie ejercen un efec-to facilitador sobre las plantas que crecen bajo su dosel que presentan mejor estado hiacutedrico que las situadas fuera de la influencia de la planta en las zonas de los claros desprovistas de vegetacioacuten (Merino Martiacuten 2010) Un nuevo disentildeo de las reve-getaciones alternativo a las plantaciones lineales puede surgir a partir del uso de especies capaces de funcionar como islas de fertilidad en un patroacuten de matas y claros

Figura 4 Ladera colonizada por Genista scorpius especie que ac-tuacutea como isla de actividad bioloacutegica potenciada hidroloacutegicamente Las especies del subvuelo de G scorpius se ven hidroloacutegicamente facilitadas lo que indica que existe un control bioacutetico del ciclo del agua No existen entradas externas de escorrentiacutea desde la cabecera

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Figura 1 Gradiente de interacciones ecohidroloacutegicas desde el dominio de la reguerizacioacuten (control abioacutetico) hasta el dominio de la vegetacioacuten arbustiva (control bioacutetico mediado por las islas de fertilidad) (Merino Martiacuten et al 2011)

Figura 2 Ladera reguerizada con control abioacutetico del ciclo del agua y reducido establecimiento de la vegetacioacuten El deacuteficit hiacutedrico acen-tuado por los regueros limita el establecimiento y desarrollo de la vegetacioacuten Noacutetese que los ejemplares de Medicago sativa se localizan en el borde de los regueros El elevado volumen de esco-rrentiacutea circulante tiene su origen en una amplia cabecera de ladera exportadora de escorrentiacutea

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Las especies vegetales identificadas en las parcelas ex-perimentales durante los trabajos expuestos en este capiacutetulo se clasificaron en dos grupos introducidas mediante teacutecnicas de revegetacioacuten y especies que colonizan de forma natural (Moreno de las Heras et al 2008) A su vez clasifican las que llegan de forma natural en frecuentes (presentes en maacutes del 5 de los taludes) y escasas (presentes en menos de 5 de los taludes) En la paacutegina de la izquierda se muestran seis especies pertenecientes al grupo de las frecuentes que de izquierda a derecha y de arriba abajo son Llanteacuten blanco (Plantago albicans) aguja de pastor (Erodium ciconium) murajes (Anagallis arvensis) hierba betun-era (Psoralea bituminosa) rabanza (Diplotaxis eruci-odes) y aacuternica (Pallenis spinosa) Sobre estas liacuteneas de izquierda a derecha y de arriba abajo se muestran otras tantas especies pertenecientes al grupo de las es-casas alheliacute triste (Matthiola fruticulosa) untildea de gato (Sedum sediforme) chiribita (Bellis perennis) alcabota (Mantisalca salmantica) aguilentildea (Aquilegia vulgaris) y hierba cana (Senecio vulgaris) Autor Ignacio Mola

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sIV CONCLUSIONES SOBRE LOS EFECTOS DE LA EROSIOacuteN

Los trabajos mencionados permiten precisar los efectos de la erosioacuten (por regueros y laminar) sobre el suelo y la vegetacioacuten en estas laderas artificia-les De este modo las restricciones impuestas por la erosioacuten al desarrollo vegetal dificultan considera-blemente la incorporacioacuten de materia orgaacutenica en el suelo (Moreno de las Heras 2009b) En consecuencia los procesos de desarrollo y organizacioacuten espacial de la estructura fiacutesica y funcionalidad bioloacutegica del suelo se ven draacutesticamente limitados Entre ellos el desarrollo de la estabilidad de los agregados el ta-mantildeo de las poblaciones microbianas y su actividad asiacute como la mineralizacioacuten de la materia orgaacutenica y el reciclado de nutrientes del suelo (nitroacutegeno y foacutes-foro) Incluso en condiciones de erosioacuten moderada los procesos de formacioacuten edaacutefica son considerable-mente lentos probablemente debido a las pequentildeas cantidades de materia orgaacutenica acumuladas en el suelo (en general inferiores al 2)

La relacioacuten entre los procesos erosivos y el desa-rrollo de los ecosistemas de ladera restaurados es

fundamentalmente no lineal (Moreno de las Heras et al 2011) Asiacute la disponibilidad de agua para la pro-duccioacuten vegetal se ve reducida de forma exponencial con las tasas de erosioacuten generando a su vez caiacutedas paralelas en los atributos baacutesicos de las comunida-des vegetales (biomasa y riqueza) y en la actividad de los procesos de formacioacuten del suelo En cuanto al efecto de la vegetacioacuten herbaacutecea sobre el control de la erosioacuten se ha demostrado que sigue tambieacuten una relacioacuten exponencial negativa seguacuten la cual las tasas erosivas y la generacioacuten de escorrentiacutea se reducen apreciablemente con cubiertas vegetales entre el 30-50 lo que desde el punto de vista aplicado lleva a plantear como objetivo praacutectico de las revegeta-ciones que buscan el control de la erosioacuten alcanzar un cubrimiento del 50 de la superficie del suelo (Moreno de las Heras et al 2009) Diversos trabajos desarrollados en taludes de carretera y ambientes mineros confirman la efectividad de este umbral de cubierta vegetal sobre el control de los procesos ero-sivos en entornos de clima mediterraacuteneo (Andreacutes y Jorba 2000 Loch 2000 Bochet et al 2010)

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Importancia del suelo para la restauracioacuten de la cubierta vegetal

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CAPIacuteTULO 4 Importancia del suelo para la restauracioacuten de la cubierta vegetal

Pablo Garciacutea-Palacios

I INTRODUCCIOacuteN

El hecho de incluir un capiacutetulo especiacutefico sobre el suelo y sus relaciones con la vegetacioacuten tiene como objetivo principal poner de manifiesto la importancia de los suelos como componente bioacutetico y abioacuteti-co fundamental en los proyectos de restauracioacuten al mismo nivel que la vegetacioacuten

La sucesioacuten de los ecosistemas (veacutease el Capiacutetulo 5 para una explicacioacuten maacutes detallada del concepto de sucesioacuten) se ha centrado tradicionalmente en las co-munidades de plantas (Chapin et al 1994) Sin em-bargo los suelos y las comunidades de organismos (Figura 1) que viven en ellos pueden desempentildear un papel fundamental en el desarrollo de las funciones ecosisteacutemicas antes incluso de que se establezcan las plantas (Bardgett et al 2007) Dado que la restaura-cioacuten se basa esencialmente en la manipulacioacuten de la sucesioacuten (Walker et al 2007) es necesario considerar el papel del suelo y sus interacciones con las plantas asiacute como la dinaacutemica temporal de estas relaciones en la restauracioacuten de los ecosistemas Esta separa-cioacuten claacutesica entre la ecologiacutea vegetal y la ecologiacutea de suelos ha tenido repercusiones aplicadas direc-tas Actualmente en la mayoriacutea de los proyectos de restauracioacuten de infraestructuras lineales el suelo es tratado simplemente como el soporte fiacutesico de las plantas Sin embargo esta tendencia estaacute cambiando y ya existen ejemplos concretos de restauraciones de infraestructuras lineales que han tenido eacutexito gracias a que han reconocido la importancia del suelo desde las fases iniciales del proyecto

El suelo ademaacutes del sustrato mineral contiene materia orgaacutenica aire agua y organismos vivos Su formacioacuten es el resultado de la interaccioacuten a lo largo del tiempo de varios elementos sustratos minerales clima orga-nismos presentes topografiacutea y vegetacioacuten A medida que avanza este proceso de formacioacuten aumenta la proporcioacuten de minerales secundarios (como las arci-llas) la cantidad de material con contenido orgaacutenico se desarrollan comunidades de organismos (inverte-brados hongos bacterias etc) y se incrementa la pro-duccioacuten de nutrientes permitiendo el establecimiento de las plantas La construccioacuten de infraestructuras li-neales produce una serie de impactos negativos sobre

el suelo especialmente cuando se emplean meacutetodos de excavacioacuten (pe desmonte) y en menor medida de acumulacioacuten (pe terrapleacuten) Los principales im-pactos son el empobrecimiento del sustrato y la des-truccioacuten de su estructura En este capiacutetulo se comen-tan los factores y procesos maacutes importantes a la hora de condicionar el desarrollo de la cubierta vegetal que se pretende restaurar Sin embargo ademaacutes de las teacutec-nicas ecotecnoloacutegicas habituales (veacutease Capiacutetulo 6) hay una serie de praacutecticas previas a la construccioacuten de la infraestructura que pueden aumentar enormemente la eficacia de la restauracioacuten del suelo y por lo tanto de la cubierta vegetal

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Figura 1 Fotografiacuteas de tres tipos de organismos clave para el funcionamiento del suelo y el establecimiento de las plantas A) Los organismos que forman la costra bioloacutegica (liacutequenes musgos y cianobacterias) colonizan las capas superficiales del suelo y son muy importantes para la estabilizacioacuten del suelo y el control de la erosioacuten en las fases iniciales de la sucesioacuten B) Noacutedulos radicales formados por la asociacioacuten simbioacutetica entre bacterias (pe Rhizobium) y raiacuteces de plantas leguminosas Esta asociacioacuten permite a las plantas obtener nitroacutegeno de la atmoacutesfera y por lo tanto reducir el uso de fertilizantes quiacutemicos C) Las lombrices de tierra promueven la descomposicioacuten de la materia orgaacutenica y la mezcla de los horizontes edaacuteficos

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II FACTORES Y PROCESOS QUE CONDICIONAN EL EacuteXITO DE LA RESTAURACIOacuteN DE LA CUBIERTA VEGETAL

La identificacioacuten de los factores que condicionan el crecimiento de la cubierta vegetal de los taludes de carretera y otras obras similares es fundamen-tal para la restauracioacuten a largo plazo de estos eco-sistemas degradados (Steinfeld et al 2007) Salvo que se mencione expresamente en este apartado se describen de forma general los principales factores y procesos que condicionan la restauracioacuten de la vegetacioacuten independientemente del tipo de talud Sin embargo las diferencias entre desmontes y te-rraplenes son fundamentales a la hora de determinar la importancia de cada factor

1 Aportes y peacuterdidas de agua

a Precipitacioacuten

En ausencia de riego praacutectica poco habitual en los maacutergenes de infraestructuras lineales la precipita-cioacuten es el principal aporte de agua La escasez de precipitaciones es un problema en algunas zonas del sur y sureste peninsular En general cuando la precipitacioacuten total no supera los 400 mm anuales podemos hablar de clima semiaacuterido En estas zonas las lluvias son el principal factor limitante para el desarrollo de la vegetacioacuten

b Balance infiltracioacuten-escorrentiacutea

El proceso principal que regula el equilibrio entre la cantidad de agua aportada por las precipitaciones y la que realmente es absorbida por el suelo es el balance entre infiltracioacuten y escorrentiacutea Cuando las tasas de infiltracioacuten son inferiores a las precipita-ciones se produce escorrentiacutea superficial y la con-siguiente peacuterdida de agua de lluvia Ademaacutes la es-correntiacutea arrastra materiales aumentando la erosioacuten del suelo y la peacuterdida de semillas a lo largo de la pendiente El tamantildeo y la abundancia de los agrega-dos superficiales del suelo determinan las tasas de infiltracioacuten La compactacioacuten del suelo por maquina-ria pesada durante la estabilizacioacuten de la pendiente disminuye enormemente la infiltracioacuten

c Capacidad de almacenamiento de agua uacutetil del suelo

Las propiedades hidroloacutegicas del suelo determi-nan el nuacutemero de diacuteas que el agua estaacute disponible para las plantas La cantidad de agua almacenada en el suelo se denomina capacidad de campo y depende principalmente de la textura del suelo de su estructura y de su contenido en materia or-gaacutenica Los terraplenes y los desmontes se suelen comportar de forma completamente diferente en este sentido Bochet y Garciacutea-Fayos (2004) obser-varon coacutemo en desmontes de Valencia el agua soacutelo estaba disponible para las plantas durante 15 diacuteas desde la uacuteltima precipitacioacuten Este tiempo au-mentaba hasta 7 meses en terraplenes cercanos Las distintas propiedades hidroloacutegicas del suelo de ambos taludes explican estas diferencias tan acusadas Por lo tanto en zonas semiaacuteridas el factor limitante para la vegetacioacuten no es tanto la lluvia sino el tiempo que el agua estaacute disponible para las plantas en el suelo

2 Reciclado de nutrientes y fertilidad

En general se asume que una limitacioacuten importan-te de los nuevos sustratos generados en la cons-truccioacuten de infraestructuras lineales es su baja fer-tilidad La fertilizacioacuten a gran escala es una teacutecnica de revegetacioacuten muy extendida que se suele llevar a cabo sin una evaluacioacuten previa de la fertilidad del suelo a restaurar Sin una evaluacioacuten previa la aplicacioacuten de la fertilizacioacuten por defecto por poner un ejemplo es lo mismo que si un doctor le receta medicinas a un paciente sin haberle diagnosticado previamente Por lo tanto un elemento clave para la restauracioacuten de la vegetacioacuten es la evaluacioacuten previa de los factores edaacuteficos que pueden condi-cionar su desarrollo En Espantildea hay muchos labo-ratorios tanto privados como vinculados a organis-mos puacuteblicos de investigacioacuten que se dedican a analizar muestras de suelo En la Tabla 1 se recogen algunos de los laboratorios de anaacutelisis de suelo que hay en Espantildea

Tabla 1 Ejemplos de laboratorios de anaacutelisis de suelos en Espantildea

NOMBRE CARAacuteCTER DIRECCIOacuteN PAacuteGINA WEB EMAIL

Agrolab analitica Privado Poliacutegono Industrial Mutilva Baja Calle S nordm 8 31192-Mutilva Baja Navarra

wwwagrolabes

Centro de Apoio Cientiacutefico Tecnoloacutexico aacute Investigacioacuten

Puacuteblico Universidade de Vigo Campus Lagoas-Marcosende 15 36310-Vigo

httpwebsuvigoescactiweb

Laboratorios Escuredo

Privado C Dr Domegravenech 1 planta 43203-Reus Tarragona

labescuredonet

Laboratorio Agroalimentario de Atarfe

Puacuteblico Avda de la Diputacioacuten sn 18230-Atarfe Granada

Servizos de Apoio a Investigaccedilatildeo

Puacuteblico Universidad de A Coruntildea Servizos de Apoio aacute Investigacioacuten Edificio Servicios Centrales de Investigacioacuten Campus de Elvintildea sn 15071 A Coruntildea

httpwwwsaiudcescastellanophpintrophp

NutriLab-URJC Puacuteblico Edificio Departamental I laboratorio 225 C Tulipaacuten sn 28933-Moacutestoles

httpwwwnutrilab-urjcesplt_Homeaspx

El reciclado de nutrientes es el proceso por el cual el suelo almacena y libera nutrientes esenciales para el crecimiento y la supervivencia de las plan-tas El objetivo de este apartado no es explicar cuaacuteles son los nutrientes limitantes para el cre-cimiento de las plantas (informacioacuten disponible en cualquier libro especializado) sino poner de manifiesto la importancia de este proceso natural para el desarrollo de la vegetacioacuten Cuando se trata de restaurar taludes de infraestructuras li-neales el objetivo principal es crear sistemas que sean autosuficientes a largo plazo Por lo tanto favorecer el reciclado de nutrientes maacutes allaacute de las aportaciones puntuales que pueda ocasionar la fertilizacioacuten es una herramienta muy eficaz para favorecer procesos sucesionales durante el pro-yecto de restauracioacuten

a Carbono y nitroacutegeno

El nitroacutegeno suele ser el nutriente maacutes limitante para el crecimiento de las plantas y por lo tanto para la recuperacioacuten de la cubierta vegetal en los

taludes de infraestructuras lineales (Petersen et al 2004) En general se habla de un miacutenimo de 700 kg N totalha para el automantenimiento de un ecosistema fuertemente degradado (Bradshaw et al 1982) El carbono regula la cantidad de nitroacute-geno disponible en los suelos porque es la fuen-te de energiacutea principal para los microorganismos del suelo encargados de descomponer la materia orgaacutenica La proporcioacuten de carbono y nitroacutegeno presente en el suelo (CN) es un buen indicador de deacuteficit o superaacutevit de nitroacutegeno para las plantas Si los organismos descomponedores no encuen-tran suficiente nitroacutegeno en la materia orgaacutenica lo tomaraacuten directamente del suelo compitiendo seriamente por este nutriente con las plantas Por ejemplo un CN de 301 o mayor indica que los descomponedores han consumido el nitroacutegeno disponible en el suelo dejando muy poco para las plantas Por lo tanto no existe una solucioacuten uacutenica y general en relacioacuten con la fertilidad del suelo y las consecuencias para la vegetacioacuten ya que el balance puede ser positivo o negativo seguacuten el objetivo que se quiera conseguir

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bull Si el objetivo es aumentar raacutepidamente la cobertu-ra vegetal con la intencioacuten de evitar la erosioacuten de los primeros meses posteriores a la construccioacuten del talud un alto contenido en nitroacutegeno favore-ceraacute la presencia de especies vegetales nitroacutefilas de raacutepido crecimiento Por lo tanto la fertilizacioacuten puede ser una buena solucioacuten a corto plazo para aumentar la cobertura vegetal de taludes extrema-damente pobres como los taludes semiaacuteridos de la provincia de Valencia (0074 mg N totalg sue-lo) donde los tratamientos de restauracioacuten han de mejorar draacutesticamente las propiedades del suelo como paso previo a la colonizacioacuten de semillas desde zonas naturales (Bochet et al 2007)

bull Si el objetivo es promover la diversidad de la comunidad de plantas y favorecer la entrada de especies de lento crecimiento caracteriacutesticas de etapas sucesionales maacutes avanzadas un alto con-tenido en nitroacutegeno puede ser contraproducen-te Las especies de raacutepido crecimiento anteriores dominaraacuten la comunidad e impediraacuten el estable-cimiento de especies nativas perennes En este caso la aplicacioacuten de productos vegetales de alto contenido en CN (mulch paja etc) a la superfi-cie del suelo o mezclado en eacutel es una buena es-trategia para disminuir la cantidad de nitroacutegeno disponible para las especies anuales dominantes (veacutease Capiacutetulo 7) y favorecer la presencia de especies de intereacutes para la restauracioacuten a largo plazo (lentildeosas perennes etc)

b Actividad bioloacutegica e interacciones planta-organismos del suelo

La tasa de cambio hacia la vegetacioacuten natural a lo largo de la sucesioacuten secundaria en ecosistemas antropizados depende en gran medida de las in-teracciones entre las plantas y la biota del suelo (Wardle et al 2004 Holtkamp et al 2008) Las comunidades de plantas estaacuten iacutentimamente aso-ciadas a los organismos del suelo y a los procesos ecoloacutegicos que se desarrollan en eacutel Las plantas proporcionan carbono y otros nutrientes a las co-munidades de descomponedores del suelo y sus raiacuteces tambieacuten constituyen el haacutebitat adecuado para multitud de organismos como herbiacutevoros patoacutegenos y simbiontes (Wardle 2002 Bardgett 2005) Por otro lado la biota del suelo determina la estructura y la productividad de las comunida-des vegetales a traveacutes de la descomposicioacuten de la materia orgaacutenica que condiciona la disponibilidad

de nutrientes para las plantas Sin embargo la biota del suelo tambieacuten controla la estructura y la composicioacuten de las comunidades vegetales a traveacutes de las relaciones entre las plantas y los organismos que estaacuten iacutentimamente asociados a sus raiacuteces (Wardle 2002) La contribucioacuten de los microorganismos del suelo a distintos procesos ecosisteacutemicos de intereacutes para las plantas es altiacute-sima pudiendo llegar a controlar hasta el 50 de la productividad vegetal el 80 de la absorcioacuten de nitroacutegeno y foacutesforo y el 50 de la diversidad vegetal en ecosistemas terrestres (Van der Heijden et al 2008) Estas relaciones pueden ser mutualis-tas como las formadas con las bacterias fijadoras de nitroacutegeno o con los hongos micorriacutecicos (Figura 2A y 2B) o antagonistas como las establecidas con los herbiacutevoros y los patoacutegenos de las raiacuteces (Figura 2C y 2D) Las plantas vasculares con sim-biontes fijadores de nitroacutegeno (pe leguminosas) tienen una importancia capital durante las etapas iniciales de las sucesioacuten porque aumentan los ni-veles de este nutriente en el suelo hasta alcan-zar los requeridos por especies caracteriacutesticas de etapas tardiacuteas de la sucesioacuten (Walker y del Moral 2003) Las asociaciones con hongos micorriacutecicos estaacuten ampliamente extendidas en el reino vegetal Se estima que aproximadamente el 80 de todas las plantas terrestres forman asociaciones simbioacute-ticas con este tipo de hongos (Smith y Read 1997) Los hongos micorriacutecicos aportan resistencia a las enfermedades y a la sequiacutea y proporcionan una variedad de nutrientes a las plantas incluyendo nitroacutegeno foacutesforo cobre hierro y zinc (Van der Heijden et al 2008) Las relaciones antagonistas o perjudiciales para las plantas las suelen pro-vocar los patoacutegenos y los herbiacutevoros de las raiacute-ces Este tipo de relaciones han sido ampliamente estudiadas en un contexto agronoacutemico aunque su papel como modulador de la dinaacutemica de las comunidades vegetales y la sucesioacuten es mucho maacutes desconocido (Wardle 2002) No obstante hay evidencias que sugieren un papel clave de estos organismos en la sustitucioacuten de las especies vege-tales pioneras por especies tardiacuteas de la sucesioacuten (Van der Putten et al 1993) Por lo tanto este tipo de interacciones entre las plantas y la bio-ta del suelo tiene implicaciones muy importantes para la restauracioacuten de los ecosistemas afectados por infraestructuras lineales en donde uno de los objetivos principales a largo plazo es el estable-cimiento de comunidades vegetales caracteriacutesticas de etapas sucesionales avanzadas

Figura 2 A) Noacutedulos bacterianos de fijacioacuten de nitroacutegeno asociados a la raiacutez de una leguminosa B) Red micorriacutecica formada por las hifas de un hongo C) Nematodo del geacutenero Heterodera herbiacutevoro de las raiacuteces de muchas especies de intereacutes agronoacutemico D) Hongo del geacutenero Pythium patoacutegeno de las raiacuteces muy comuacuten en muchas especies de plantas vasculares (Fuente httpwwwusdagov)

Existen pocos trabajos sobre las implicaciones para la restauracioacuten de las interacciones planta-biota del suelo y la mayoriacutea de ellos se han desarrolla-do en campos agriacutecolas abandonados de Europa central Kardol et al (2006) establecieron que el signo de estas interacciones cambiaba de negativo a positivo a lo largo de la sucesioacuten y atribuiacutean la temporalidad de las especies vegetales pioneras y la persistencia de las especies caracteriacutesticas de etapas sucesionales avanzadas a este tipo de me-canismos En herbazales de taludes de carretera del sureste semiaacuterido de Madrid Garciacutea Palacios et al (2011) observaron coacutemo cinco antildeos despueacutes de la construccioacuten de un terrapleacuten las interacciones planta-microorganismos del suelo eran capaces de promover un eficiente reciclado de los nutrientes

(Figura 3) En este caso (terraplenes de clima se-miaacuterido con pendientes inferiores a 30deg) no era necesario haberse gastado mucho presupuesto en tratamientos de restauracioacuten como la fertilizacioacuten o la hidrosiembra Los cambios sucesionales a corto plazo (cinco antildeos) en la composicioacuten de las comu-nidades vegetales y microbianas del suelo fueron capaces de mejorar el reciclado de nutrientes un proceso clave para la restauracioacuten a largo plazo de estos herbazales Por ello una de las teacutecnicas maacutes prometedoras para la restauracioacuten de taludes de infraestructuras lineales y que tiene en cuenta la importancia de las interacciones planta-organismos del suelo es el uso de inoacuteculos de suelo como ca-talizador de la sucesioacuten vegetal (Estauacuten et al 2007 Steinfeld et al 2007)

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Talud de dos antildeos

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R2 = 040 RECICLADODE NUTRIENTES

COMUNIDADVEGETAL

COMUNIDADMICROBIANA

R2 = 075 RECICLADODE NUTRIENTES

Talud de cinco antildeos

Figura 3 Interacciones comunidad vegetal-comunidad microbiana del suelo en dos terraplenes de distinta edad de la provincia de Madrid (Autopistas R4 y AP-36) En el esquema se observa coacutemo las interacciones planta-microorganismos del suelo eran responsables del 40 del reciclado de nutrientes en los terraplenes maacutes joacutevenes Este valor aumentoacute hasta el 75 en los taludes de cinco antildeos (Fuente Garciacutea-Palacios et al 2011)

c pH y salinidad

El pH del suelo modula la disponibilidad de los nutrientes minerales la toxicidad mineral y la fija-cioacuten de nitroacutegeno Si los suelos son aacutecidos (pH lt 6) la habilidad de las plantas para utilizar algunos nutrientes como el calcio o el magnesio disminuye Si la acidez es auacuten mayor (pH lt 45) el aluminio se vuelve soluble y toacutexico para las plantas Si los suelos son baacutesicos o alcalinos (pH lt 8) la elevada presencia de carbonatos puede interferir en la ob-tencioacuten de nutrientes como el foacutesforo hierro o zinc En suelos muy salinos (pH lt 85) tiacutepicos de zonas aacuteridas y semiaacuteridas la concentracioacuten de sodio pue-de impedir la absorcioacuten de agua por las plantas La tierra vegetal tiene contenidos en sales menores que las capas inferiores por lo tanto si durante la construccioacuten del talud es retirada la salinidad del suelo puede aumentar draacutesticamente Como en ca-sos anteriores una correcta evaluacioacuten previa debe ser realizada antes de decidir queacute teacutecnica de res-tauracioacuten se debe emplear

d Tierra vegetal

La capa superficial del suelo (sus primeros centiacutemetros) o tierra vegetal (en ingleacutes topsoil) es el horizonte edaacute-fico que se encuentra justo debajo de la hojarasca y que se caracteriza por contener grandes cantidades de materia orgaacutenica raiacuteces y semillas (Balaguer 2002 Tor-mo et al 2007) La tierra vegetal tiene una alta concen-tracioacuten de nutrientes disponibles para las plantas Asiacute mismo alberga la mayor parte de la actividad bioloacutegica del suelo amortigua las condiciones microclimaacuteticas y disminuye la peacuterdida de agua por evaporacioacuten (Tormo et al 2009) Los sitios que carecen de tierra vegetal no pueden albergar comunidades productivas de plantas ni coberturas vegetales altas lo cual se traduce en ero-sioacuten Una praacutectica habitual en la construccioacuten de infra-estructuras lineales es la retirada y almacenamiento de los horizontes superficiales del suelo (30-50 cm) para reincorporarlos posteriormente a la superficie de los ta-ludes recieacuten generados La aplicacioacuten de tierra vegetal si esta se ha conservado debidamente (veacutease aparta-do III2 Almacenamiento del suelo) puede suavizar la

mayor parte de las condiciones edaacuteficas para el desa-rrollo de la vegetacioacuten Un buen ejemplo de los efectos de la tierra vegetal para la restauracioacuten de la vegeta-cioacuten de taludes de carretera es el estudio de Tormo et al (2007) realizado en taludes de Valencia bajo clima semiaacuterido En este estudio las parcelas con tierra ve-getal alcanzaron en un antildeo los mismos valores de co-bertura vegetal que las parcelas sin dicho tratamiento alcanzaron en cuatro Sin embargo existen diferencias en cuanto al eacutexito de la tierra vegetal entre desmontes y terraplenes Mientras que en terraplenes suele ser un tratamiento muy eficaz para aumentar la cobertura ve-getal durante los primeros antildeos de la restauracioacuten en desmontes con elevada pendiente (gt30ordm) la aplicacioacuten de tierra vegetal suele fracasar (Valladares et al 2004) al menos en la mayor parte del talud (Figura 4)

3 Condiciones fiacutesicas

Un aspecto clave para el eacutexito de la colonizacioacuten vegetal en suelos degradados como los que forman

los taludes de infraestructuras lineales es la textura del material (Tormo et al 2009) Si la textura de los materiales es demasiado gruesa los nutrientes y el agua no podraacuten quedar retenidos en los poros del suelo

Si a esto le unimos una elevada pedregosidad del terreno la disponibilidad de nutrientes y agua para las plantas seraacute muy reducida incluso con al-tas precipitaciones y una eficiente mineralizacioacuten de la materia orgaacutenica Si la textura de los ma-teriales es demasiado fina (dominio de arcillas) se pueden producir condiciones de encharcamien-to y falta de oxiacutegeno (anaerobiosis) que pueden afectar al establecimiento de las plantas Por lo tanto las condiciones idoacuteneas se consiguen con una textura equilibrada La falta de materia orgaacute-nica es otro factor que condiciona enormemente la estructuracioacuten de los suelos de los taludes y que tambieacuten contribuye a disminuir la retencioacuten de agua y nutrientes y se da maacutes frecuentemente en texturas gruesas que finas

Figura 4 Banda de vegetacioacuten favorecida por la presencia de tierra vegetal en la cabecera de un desmonte de la autopista de la Costa del Sol (Maacutelaga) (Foto Archivo documental del Grupo de Ecologiacutea y Fisiologiacutea vegetal de Plantas Mediterraacuteneas del IRN-CCMA CSIC)

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IacuteNDICE

III MEDIDAS PREVENTIVAS

En el apartado anterior se han descrito los principales factores del suelo que condicionan el desarrollo de la cubierta vegetal a restaurar y coacutemo la tierra vegetal puede paliar algunos de los deacuteficits de los sustratos generados por infraestructuras lineales A continuacioacuten se detallan algunas medidas preventivas que pueden tomarse en la fase de construccioacuten del talud para re-ducir los efectos negativos de los anteriores factores edaacuteficos en la restauracioacuten de la cubierta vegetal

1 Movimiento del suelo

El principal cambio que sufre el suelo durante su extraccioacuten y transporte en las obras de construc-cioacuten de la infraestructura lineal es el aumento de la compactacioacuten con la consiguiente disminucioacuten de la porosidad La baja porosidad del suelo afecta negativamente a la capacidad de las raiacuteces de las plantas para penetrar en profundidad disminuye el movimiento de agua y nutrientes y aumenta la pro-babilidad de que se den condiciones anaeroacutebicas (Harris et al 1996) La compactacioacuten del suelo es un fenoacutemeno difiacutecil de corregir y de un elevado costo Por lo tanto los movimientos de tierra realizados durante la fase de construccioacuten de la infraestructura lineal deben disentildearse con la intencioacuten de mitigar la gravedad de este impacto Las actuaciones que pueden llevarse a cabo para prevenir la compacta-cioacuten del suelo tienen que ver con la maquinaria que se utilice en la construccioacuten del talud (peso tipo de neumaacuteticos velocidad de trabajo nuacutemero de pasa-das etc) y con la naturaleza del sustrato (contenido en humedad materia orgaacutenica etc)

2 Almacenamiento del suelo

Los impactos maacutes negativos para el suelo como sus-trato para el crecimiento de la vegetacioacuten a nivel bioloacutegico quiacutemico y fiacutesico ocurren durante su al-macenamiento como paso previo a su colocacioacuten en el emplazamiento definitivo (Harris et al 1996) La duracioacuten del almacenamiento es fundamental para el eacutexito posterior del extendido de la tierra vegetal Asiacute Rokich et al (2000) registraron una disminucioacuten del 50 en la germinacioacuten de semillas en las parcelas tratadas con tierra vegetal almacenada durante un antildeo respecto a las que fueron tratadas con tierra ve-getal fresca La altura de los acuacutemulos de tierra tam-bieacuten es importante Las capas superiores mantienen condiciones aeroacutebicas durante el almacenamiento

Las capas maacutes profundas desarrollan condiciones anaeroacutebicas (Harris et al 1996) La capa intermedia oscila entre ambas dependiendo de las condiciones de humedad El tamantildeo y la velocidad de los efectos negativos dependen de las caracteriacutesticas texturales del suelo Los suelos arcillosos se vuelven anaero-bios en un 90 cuando la altura del acuacutemulo de tierra supera los 2 metros Sin embargo los suelos arenosos aguantan alturas similares con un porcen-taje de condiciones anaeroacutebicas mucho maacutes bajo Por lo tanto la altura de los acuacutemulos de tierra debe ser lo maacutes baja posible siempre teniendo en cuenta el espacio del que se disponga El porcentaje de anaerobiosis presente en la tierra vegetal almacena-da debe ser tenido en cuenta a la hora de planificar los futuros tratamientos de restauracioacuten Los efectos que se producen durante la fase de acumulacion del suelo fundamentalmente en las capas maacutes profun-das son los siguientes

a Efectos fiacutesicos

Fundamentalmente acentuacutean los efectos producidos durante la fase de transporte Se rompen las es-tructuras bioloacutegicas que mantienen las partiacuteculas del suelo unidas La disminucioacuten en la estabilidad de los agregados dificulta la capacidad del suelo para pro-porcionar una aireacioacuten y drenaje adecuados para el crecimiento vegetal Cualquier perforacioacuten producida por invertebrados del suelo o por tratamientos de restauracioacuten seraacute raacutepidamente bloqueada por pe-quentildeas partiacuteculas que ya no estaacuten unidas formando agregados estables

b Efectos quiacutemicos

Dado que la compactacioacuten imposibilita el aporte de oxiacutegeno al suelo es normal que se desarrollen con-diciones anaeroacutebicas durante los primeros meses del almacenamiento En esta situacioacuten se producen gran cantidad de sulfitos que dan el caracteriacutestico color gris al suelo poco aireado La falta de oxiacutege-no tambieacuten impide la transformacioacuten de nitroacutegeno orgaacutenico a nitrato producida durante la mineraliza-cioacuten de la materia orgaacutenica El ciclo del nitroacutegeno se detiene en el amonio que se acumula a costa de una disminucioacuten en el nitrato Ademaacutes el nitrato acumulado anteriormente se transforma en nitroacutege-no gaseoso que termina en la atmoacutesfera Cuando el suelo se extiende para construir el talud el nitroacute-geno acumulado se puede perder raacutepidamente con las primeras lluvias

c Efectos bioloacutegicos

La abundancia de microorganismos en el suelo almacenado disminuye en profundidad impidien-do la realizacioacuten de las funciones claves para el

reciclado de nutrientes anteriormente detalladas Los invertebrados como las lombrices de tierra son extremadamente susceptibles ya que son fiacutesi-camente destruidos durante el transporte y alma-cenamiento del suelo

VI EJEMPLOS DE EacuteXITO Y DE FRACASO

Ejemplo de eacutexito Uso de inoacuteculos de micorrizas para la restauracioacuten de especies lentildeosas en taludes de carretera y canteras (Caravaca et al 2003)

Doacutende y cuaacutendo Murcia (38deg 23rsquo N 1deg 10rsquo O) 2000-2001

Ecosistema a restaurar espartal semiaacuterido degrada-do por pastoreo y talas Precipitacioacuten total 315 mm temperatura media 20 degC Sustrato calizo Cobertura inicial del 20 dominada por Rosmarinus officina-lis y Stipa tenacissima Cuatro especies de arbusto como objetivo de la restauracioacuten

Tratamiento inoacuteculo de micorrizas en tres niveles inoacuteculo nativo de suelo de un aacuterea natural cercana [(compuesto por esporas de Glomus geosporum (Ni-col amp Gerd) Walker (EEZ 31) Glomus albidum Walker amp Rhodes (EEZ 39) Glomus microaggregatum Koske Gemma amp Olexia (EEZ 40) Glomus constrictum Tra-ppe (EEZ 42) Glomus mosseae (Nicol amp Gerd) Gerd amp Trappe (EEZ 43) Glomus coronatum Giovannetti (EEZ 44) Glomus intraradices Schenck amp Smith (EEZ 45) y Glomus sp (EEZ 46)] inoacuteculo exoacutetico [(com-puesto por esporas de Glomus claroideum Schenck amp Smith (EEZ 24)] y control

IV PREGUNTAS CLAVE

iquestCuaacuteles son las condiciones iniciales del suelo

Para contestar a esta pregunta se deben analizar distintas variables edaacuteficas (pH carbono nitroacute-geno foacutesforo textura salinidad estabilidad de agregados banco de semillas) en laboratorios externos o mediante convenios con centros de investigacioacuten

iquestQueacute hago con la tierra vegetal

Evitar retirarla siempre que se pueda En caso contrario el almacenamiento hasta su posterior extendido debe durar el menor tiempo posible

iquestCoacutemo almaceno la tierra vegetal

En acuacutemulos de tierra de poca altura y compactacioacuten

iquestQueacute tratamientos son necesarios para recuperar la cubierta vegetal

En primer lugar se ha de evaluar la necesidad de llevar a cabo una restauracioacuten activa Este tipo de restauracioacuten se justificaraacute uacutenicamente en los ca-sos en los que la colonizacioacuten natural de semillas desde aacutereas cercanas y la posterior sucesioacuten del ecosistema se vean fuertemente limitadas por las condiciones edaacuteficas del sitio a restaurar

V ERRORES HABITUALES

bull Destruccioacuten o descarte de la tierra vegetal o topsoil durante la fase de construccioacuten

bull Mezcla de la tierra vegetal o topsoil con el resto del suelo del talud o con materiales de construccioacuten externos

bull Acuacutemulos de suelo de gran altura independiente-mente de sus caracteriacutesticas texturales y almace-nados durante periodos prolongados de tiempo

bull Fertilizacioacuten a gran escala desde el primer antildeo de la restauracioacuten sin realizar anaacutelisis previos del suelo

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Resultados Como se puede observar en la Figura 5 un antildeo despueacutes de la plantacioacuten la biomasa (peso seco) de Olea europaea y de Pistacia lentiscus fue un 630 y 300 respectivamente mayor en los tratamientos inoculados que en los no inoculados La biomasa de Retama sphaerocarpa fue significa-tivamente mayor en los plantones inoculados con micorrizas exoacuteticas La biomasa de Rhamnus lycioi-des fue significativamente mayor en los plantones inoculados con micorrizas nativas

Conclusiones El uso de inoacuteculos de suelo con mi-corrizas es una buena estrategia para aumentar la biomasa de especies lentildeosas de intereacutes para la restauracioacuten

En algunas ocasiones las esporas de micorrizas recogidas en zonas cercanas al aacuterea a restaurar son maacutes efectivas que los inoacuteculos comerciales para garantizar el establecimiento de arbustos nativos

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Figura 5 Peso seco de O europaea P lentiscus R sphaerocarpa y R lycioides bajo los tres tratamientos de inoacuteculos de micorrizas evaluados Los datos son medias plusmn error estaacutendar Modificado a partir de Caravaca et al (2003)

Ejemplo de fracaso Restauracioacuten de un herbazal de carre-tera mediante inoculacioacuten de micorrizas (White et al 2008)

Doacutende y cuaacutendo Minnesota EE UU (44deg 46acuteN 93deg 24acuteO) 1997-1999

Ecosistema a restaurar Herbazal en un talud de carretera Precipitacioacuten total 700 mm temperatura

media 59 degC Sustrato arenoso Cobertura inicial del 30 dominada por especies anuales pioneras

Tratamiento inoacuteculo de micorrizas en tres ni-veles inoacuteculo local (uso de suelo de un aacuterea natural cercana dosis de 23000 esporasm2) inoacuteculo comercial (dosis de 4800 esporam2) y control

Resultados Como se puede observar en la Figura 6 ni la biomasa total (A) ni el porcentaje de biomasa total compuesto por especies objetivo para la res-tauracioacuten (B) fueron positivamente afectados por los dos tipos de inoacuteculos tanto en 1998 (Biomasa total F

312 = 0442 P = 0636 Especies objetivo

F312

= 0585 P = 0728) como en 1999 (Biomasa total F

312 = 0442 P = 0728 Especies objetivo

F312

= 0493 P = 0694)

Conclusiones la elevada fertilidad fundamental-mente de foacutesforo disponible y la presencia de mi-corrizas en el suelo inicial diluyeron los efectos del inoacuteculo en las comunidades vegetales Este estudio pone de manifiesto la importancia de realizar anaacuteli-sis del suelo como paso previo a la restauracioacuten Los inoacuteculos de suelo solo son necesarios cuando las condiciones del mismo son especialmente limitantes para la vegetacioacuten

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Pistacia lentiscus

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Figura 6 Biomasa total (A) y proporcioacuten de la biomasa total compuesta por especies objetivo para la restauracioacuten (B) Las especies objetivo de la restauracioacuten son tanto las introducidas en la siembra como aquellas que colonizaron el talud desde aacutereas naturales cercanas Los datos son medias plusmn error estaacutendar Modificado a partir de White et al (2008)

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INSECTOS HERBIacuteVOROS

Numerosos insectos se alimentan de plantas sobre todo de sus partes vegetativas (hojas y tallos) En la laacutemina se muestra en la imagen de la izquierda una oruga de mariposa (Fam Pieridae) Las tres imaacute-genes de la derecha corresponden a distintas espe-cies de saltamontes (Ortoptera) Autor Ignacio Mola

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Procesos ecoloacutegicos y restauracioacuten de la cubierta vegetal

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CAPIacuteTULO 5 Procesos ecoloacutegicos y restauracioacuten de la cubierta vegetal

Esther Bochet Pablo Garciacutea-Palacios Begontildea Peco Jaume Tormo y Patricio Garciacutea-Fayos

I INTRODUCCIOacuteN Y OBJETIVOS

Los taludes de infraestructuras lineales (autopistas carreteras caminos viacuteas del trenhellip) se caracterizan por tener amplias pendientes de suelo desnudo y afloramientos rocosos originadas por grandes movi-mientos de tierra Las laderas de los taludes despro-vistas de vegetacioacuten al teacutermino de la obra quedan expuestas al efecto de las lluvias con consecuencias que pueden ser graves para la seguridad vial (Na-varro 2002) Los riesgos de erosioacuten en los primeros meses que pueden llevar al derrumbe del talud en su caso maacutes extremo exigen una intervencioacuten urgente que pretende seguacuten los casos restaurar una cubier-ta vegetal densa en las laderas recieacuten construidas La forma maacutes sencilla y menos costosa de revegetar estas laderas consiste en no intervenir (restauracioacuten pasiva) pero la colonizacioacuten espontaacutenea por parte de las plantas no siempre es suficiente o suficientemente raacutepida Por ello se recurre frecuentemente a teacutecni-cas de restauracioacuten activa que favorecen y aceleran el establecimiento de la vegetacioacuten con el objetivo de controlar la erosioacuten y darle estabilidad al talud La teacutecnica de restauracioacuten maacutes comuacuten para cumplir este objetivo geomorfoloacutegico a corto plazo es la hi-drosiembra El eacutexito de las hidrosiembras es muy va-riable dependiendo en gran medida de factores como el clima la litologiacutea el tipo de talud su orientacioacuten y su pendiente la eacutepoca de la siembra las especies sembradas y las interacciones de estas uacuteltimas entre ellas y con las condiciones de la zona a restaurar (Andreacutes et al 1996 Cano et al 2002 Bochet y Garciacutea-Fayos 2004 veacutease Capiacutetulo 74) Como prueba de

ello se han descrito resultados muy dispares durante los primeros meses posteriores a la actuacioacuten Estos resultados van desde la formacioacuten de una cubierta vegetal densa y eficaz para el control de los procesos erosivos (Matesanz et al 2006) hasta una casi com-pleta desaparicioacuten del conjunto de especies sembra-das con un recubrimiento del suelo insuficiente para frenar la erosioacuten (Andreacutes y Jorba 2000)

Recientemente cientiacuteficos y teacutecnicos coinciden en que el eacutexito de las medidas de restauracioacuten pasa por un avance en el conocimiento ecoloacutegico de estos eco-sistemas emergentes cuyo funcionamiento es poco conocido en la actualidad (Valladares y Gianoli 2007) Asiacute el conocimiento de las reglas que controlan la colonizacioacuten el ensamblaje de las especies y la suce-sioacuten en las comunidades de taludes permitiraacute extraer conclusiones uacutetiles y elaborar pautas generales para la restauracioacuten de estos ecosistemas maacutes allaacute de las especificaciones locales de las zonas a restaurar (Temperton et al 2004 Valladares y Gianoli 2007)

Estudios recientes sobre la flora y la vegetacioacuten de taludes asiacute como sobre los procesos y funciones

asociados a estos ecosistemas nos permiten crear una soacutelida base de conocimiento cientiacutefico necesaria para el desarrollo de protocolos y teacutecnicas eficaces para la restauracioacuten de estas laderas

El objetivo de este capiacutetulo es dar a conocer desde la perspectiva de la ecologiacutea de la restauracioacuten las bases ecoloacutegicas a tener en cuenta a la hora de plantear una restauracioacuten del Capital Natural en for-ma de bienes y servicios (ecosistemas funcionales diversidad etc) en proyectos de infraestructuras lineales Estas bases fundadas en el conocimien-to cientiacutefico constituyen un complemento necesario a las aproximaciones tecnoloacutegicas maacutes habituales (veacutease Capiacutetulo 7) En primer lugar se describe bre-vemente el marco teoacuterico es decir los procesos eco-loacutegicos relevantes que condicionan el eacutexito de una restauracioacuten (colonizacioacuten filtros ecoloacutegicos ensam-blaje de especies en comunidades sucesioacuten) En se-gundo lugar se identifican los factores que limitan la colonizacioacuten espontaacutenea de los ecosistemas de taludes de infraestructuras lineales Finalmente se proponen distintas aplicaciones praacutecticas para una gestioacuten maacutes adecuada de dichos ecosistemas

II PROCESOS ECOLOacuteGICOS RELEVANTES MARCO TEOacuteRICO

1 La colonizacioacuten y la sucesioacuten

Cuando una zona queda desprovista de vegetacioacuten como es el caso de los taludes de infraestructuras lineales se pone en marcha el proceso de sucesioacuten vegetal que comienza por la fase de colonizacioacuten Esta uacuteltima a su vez podriacutea definirse como una funcioacuten de distintos procesos que se suceden en el tiempo la dispersioacuten la fijacioacuten y la germinacioacuten de semillas y el establecimiento de las plantas y su supervivencia (Zobel et al 2000) Asiacute la colonizacioacuten de una zona sin vegetacioacuten depende en primer lu-gar de la llegada de semillas por dispersioacuten desde las zonas circundantes a traveacutes de distintos vectores como el viento el agua o los animales Una vez en la zona si esta presenta cierta pendiente aquellas especies cuyas semillas tienen mecanismos de fija-cioacuten que impiden ser arrastrados por la gravedad o el agua de escorrentiacutea tendraacuten maacutes posibilidades de mantenerse en las laderas que aquellas especies que no disponen de dichos mecanismos (Garciacutea-Fayos et al 2010) Posteriormente las semillas que resisten al arrastre han de encontrar una serie de condiciones favorables que les permitan germinar y desarrollarse hasta convertirse en un individuo

adulto Tras la fase de colonizacioacuten las interacciones entre plantas tanto a traveacutes de la facilitacioacuten de una especie por otra que le ayuda a establecerse (inte-raccioacuten positiva) o a traveacutes de la exclusioacuten de una especie por la presencia de especies competidoras (interaccioacuten negativa) implican cambios graduales en la composicioacuten floriacutestica de las comunidades

En definitiva la colonizacioacuten de una zona dada ndashy la comunidad de plantas resultantendash depende de tres grandes grupos de factores a) la disponibilidad de semillas b) las condiciones del medio y c) las inte-racciones planta-planta conocidos a su vez como los tres grandes lsquofiltros ecoloacutegicosrsquo que determinan el ensamblaje de las especies

2 Filtros ecoloacutegicos que determinan la colonizacioacuten y el ensamblaje de las comunidades

De acuerdo con la teoriacutea de ensamblaje de las especies (assembly rules en ingleacutes) solo aque-llas pertenecientes al conjunto o pool de especies locales capaces de atravesar una serie de filtros

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podraacuten establecerse con eacutexito en una zona deter-minada (Keddy 1992 Weiher y Keddy 1999 Figu-ra 1) Mediante un proceso de seleccioacuten a traveacutes de sucesivos filtros el tamantildeo del pool de es-pecies locales se ve progresivamente reducido a un subconjunto de especies del pool original La seleccioacuten de las especies se hace en funcioacuten de sus rasgos morfoloacutegicos y funcionales que defi-nen su capacidad para alcanzar la zona por dis-persioacuten (filtro de la dispersioacuten) para adaptarse a las condiciones del medio (filtro de los factores abioacuteticos) y para competir con las demaacutes plantas establecidas (filtro de las interacciones bioacuteticas) (Keddy 1992 Weiher y Keddy 1999)

A medida que van entrando las especies en la comunidad (pool actual) y transcurre la sucesioacuten

la intensidad e influencia relativa de los filtros va cambiando Mientras que la dispersioacuten y los factores abioacuteticos tienen un mayor peso en las primeras etapas de la sucesioacuten las interacciones planta-planta van adquiriendo una mayor impor-tancia en etapas maacutes tardiacuteas (Figura 1) Estos bu-cles de retroalimentacioacuten inherentes al sistema hacen que los filtros sean dinaacutemicos y que el tamantildeo de sus mallas se esteacute reajustando con-tinuamente (Fattorini y Halle 2004 Figura 1) No obstante el dinamismo de los filtros y las pertur-baciones externas que sufren continuamente los sistemas (contaminacioacuten erosioacutenhellip) hacen que la trayectoria del sistema no sea unidireccional y predecible sino que admite muacuteltiples trayecto-rias hacia estados alternativos estables (Temper-ton et al 2004 Figura 1)

III IDENTIFICACIOacuteN DE PROCESOS Y FACTORES QUE CONTROLAN EL ENSAMBLAJE DE LAS ESPECIES EN COMUNIDADES DE TALUDES DE INFRAESTRUCTURAS LINEALES

A partir de la teoriacutea de los filtros y de estudios re-cientes sobre la flora los patrones de colonizacioacuten y las caracteriacutesticas de las plantas de las comuni-dades de taludes identificamos a continuacioacuten los factores y procesos que controlan el ensamblaje de las especies en dichas comunidades La mayoriacutea de estos estudios hacen referencia a sistemas de taludes de carreteras de distintas regiones de la Peniacutensula Ibeacuterica

1 Disponibilidad de semillas

a Dispersioacuten

La colonizacioacuten espontaacutenea de los taludes de infra-estructuras lineales al igual que de otros ecosiste-mas fuertemente perturbados y desprovistos de ve-getacioacuten (volcanes minas a cielo abierto) depende en gran medida de la presencia en sus proximida-des de zonas de vegetacioacuten natural que suministran semillas (del Moral y Wood 1993 Kirmer y Mahn 2001 Novaacutek y Prach 2003 Bochet et al 2007a) Habitualmente la llegada por dispersioacuten de las se-millas desde las zonas de vegetacioacuten circundante (pool externo de especies locales Figura 1) cons-tituye la uacutenica fuente potencial de colonizacioacuten (se habla entonces de lsquosucesioacuten primariarsquo) Sin embargo en taludes recubiertos con una capa de tierra vege-tal esta constituye una fuente alternativa de semi-llas que pueden iniciar la colonizacioacuten (pool interno de especies locales Figura 1 se habla entonces de

lsquosucesioacuten secundariarsquo) No obstante estudios recien-tes demuestran que esta fuente de semillas es esca-sa con las praacutecticas actuales de manejo de la tierra vegetal utilizadas para la restauracioacuten de taludes (Mola et al 2011)

El eacutexito de llegada de las semillas a los taludes de-pende en gran medida de la distancia entre estos y las manchas circundantes de vegetacioacuten natural asiacute como de la capacidad de las especies locales para dispersarse a larga distancia (Figuras 2 y 3)

Figura 3 Terrapleacuten con orientacioacuten sur de la autopista Andash7 en la Costa del Sol entre las localidades de Estepona y Torreguadiaro En la foto se observa la cercaniacutea del talud a una mancha de vegetacioacuten natural consistente en matorrales de Chamaerops humilis y Pistacia lentiscus (Foto Santiago Soliveres Codina)

bull Distancia a la fuente de semillas

Es bien sabido que la probabilidad de las semillas de alcanzar una zona determinada es inversamente proporcional a la distancia a la fuente de semillas (Wilson 1993) Por ejemplo en una zona de vertede-ros mineros del Este de Alemania Saumlnger y Jetschke (2004) determinan que el porcentaje de especies co-munes entre el vertedero y las zonas circundantes de vegetacioacuten natural disminuye gradualmente (del 48 al 9) a medida que la distancia de estas uacuteltimas al vertedero aumenta (de 50 a 2000 m respectiva-mente) Bochet et al (2007a) llegan a conclusiones similares en un estudio realizado en taludes de la Autoviacutea Andash3 en la Comunidad Valenciana Estos au-tores sugieren que la colonizacioacuten se inicia a par-tir de los campos de cultivo y parches de matorral cercanos situados a menos de 150 m de distancia de los taludes No obstante no todas las especies

Estreacutes ambiental

Especiacioacuten migracioacuten

Perturbacioacuten

Filtro de dispersioacuten

Pool actual

Pool dispersivo

Pool ambiental

Pool interno de especiesPool externo de especies locales

Figura 1 Modelo dinaacutemico de los filtros que controlan el proceso de ensamblaje de las especies en una comunidad de plantas Modificado a partir de Fattorini y Halle (2004) Los procesos a gran escala como la especiacioacuten y la migracioacuten determinan el pool de especies locales que lsquoesperan a las puertasrsquo de una comunidad de plantas Para poder formar parte de un pool de especies establecidas (estado actual de la comunidad) las nuevas especies tienen que ser capaces de llegar [bien por dispersioacuten desde las zonas adyacentes (pool externo de especies locales) bien por estar presentes en el banco de semillas del suelo (pool interno de especies)] de adaptarse a las condiciones del medio (filtro abioacutetico) y tambieacuten de competir con las demaacutes especies establecidas (filtro bioacutetico) Los distintos filtros dependen unos de otros al estar conectados entre siacute a traveacutes del pool de especies establecidas Por ello los filtros tienen un caraacutecter dinaacutemico y el tamantildeo de su malla es constantemente reajustado como consecuencia de la existencia de procesos internos de retroalimentacioacuten asiacute como de la posible inter-vencioacuten de elementos externos al sistema (perturbaciones y estreacutes) Por ejemplo si las mallas del filtro abioacutetico lsquose abrenrsquo como consecuencia de las modificaciones de las condiciones del medio a medida que transcurre la sucesioacuten dejaraacute paso a un mayor nuacutemero de especies y consecuentemente el filtro bioacutetico tenderaacute a lsquocerrarsersquo al verse reducida la superficie de espacios disponibles para la llegada de semillas y posterior establecimiento de nuevas plaacutentulas Al contrario unas condiciones ambientales extremas provocaraacuten el cierre praacutecticamente total del filtro abioacutetico a la vez que se abriraacute el filtro bioacutetico por la falta de competencia entre las pocas especies establecidas capaces de soportar las condiciones adversas del medio

Filtro abioacutetico

Filtro bioacutetico

Figura 2 Terrapleacuten con orientacioacuten sur de la autopista Andash5 en la provincia de Madrid en la localidad de Arroyomolinos En la foto se observa en primer teacutermino el talud objeto de estudio y en segundo la cercaniacutea a una mancha de vegetacioacuten natural consistente en una dehesa de Retama sphaerocarpa (Foto Pablo Garciacutea-Palacios)

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MIRMECOCORIA

Ejemplos de dispersioacuten de semillas yo frutos (diaacutesporas) por hormigas (mirmecocoria) De izquierda a dere-cha y de arriba abajo hormiga negra (Messor barbarus) transportando un fruto de cadillo (Medicago sp) un fruto de bolsa de pastor (Capsella bursa-pastoris) una semilla de avena (Avena sp) un fruto de lechetrezna (Euphorbia helioscopia) y abajo transportando una semilla de plaacutetano (Platanus occidentalis) A la izquierda en esta uacuteltima imagen se puede apreciar a varias hormigas sobre un fruto de caracolillo (Medicago orbicularis) Autor Ignacio Mola

ANEMOCORIA

Capiacutetulo fructificado de Diente de Leoacuten (Taraxacum sp) Se puede apreciar coacutemo los frutos (cipselas) poseen un penacho plumoso (vilano) que permite su arrastre por el viento (anemocoria) y dispersarse a largas distancias Autor Ignacio Mola

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presentes en la vegetacioacuten circundante tienen meca-nismos de dispersioacuten adecuados para alcanzar las laderas de los taludes

bull Mecanismos de dispersioacuten

En el estudio previamente citado Bochet et al (2007a) determinan que solo el 60 de las especies presentes en las aacutereas de vegetacioacuten natural a me-nos de 150 m de los taludes son capaces de alcan-zarlos por dispersioacuten En Finlandia se han descrito patrones similares para taludes de carretera y viacuteas de tren rodeados por herbazales naturales (Tikka et al 2001)

Ademaacutes en una amplia gama de haacutebitats se ha constatado que las especies cuyas semillas son dis-persadas a larga distancia por el viento (anemoacuteco-ras) o por los animales (zooacutecoras excepto las dis-persadas por hormigas) tienen maacutes probabilidades de colonizar nuevas aacutereas que aquellas especies con mecanismos de dispersioacuten a corta distancia (disper-sadas por hormigas o lsquomirmecoacutecorasrsquo o dispersadas por la fuerza de la gravedad o lsquobaroacutecorasrsquo) (Hardt y Forman 1989 Dzwonko y Loster 1992 Burke y Grime 1996 Campbell et al 2003 Martiacutenez-Ruiz y Marrs 2007) La dispersioacuten de las semillas por el viento ha demostrado ser el mecanismo maacutes eficaz a la hora de colonizar los taludes de carretera Asiacute la propor-cioacuten de especies anemoacutecoras presentes en los talu-des es notablemente superior a la que se encuentra en las zonas de vegetacioacuten natural proacuteximas al talud y que ejercen como fuente de semillas (Bochet et al 2007a veacutease apartado III4 Tabla 3) Al contrario de lo esperado las especies zooacutecoras tienen pocas pro-babilidades de alcanzar los taludes Estos represen-tan ambientes inhoacutespitos para muchos animales puesto que estaacuten continuamente expuestos al ruido del traacutefico estaacuten vallados (para garantizar la seguri-dad vial) y carecen de aacuterboles que podriacutean servir de posaderos para los paacutejaros En cuanto a las especies que carecen de mecanismos de dispersioacuten a larga distancia su probabilidad de llegar al talud aunque baja aumenta con el tiempo (van Dorp et al 1997 Kirkman et al 2004)

En resumen al igual que en otros ambientes la dis-persioacuten representa un filtro que limita la disponibili-dad de semillas para la colonizacioacuten a corto o medio plazo de los taludes Solo las especies maacutes cercanas

a los taludes o capaces de dispersarse a mayores distancias tienen posibilidades de colonizar estas laderas de forma raacutepida

b Fijacioacuten(arrastredesemillas)

Distintos trabajos demuestran que el empobreci-miento de la vegetacioacuten en zonas caracterizadas por fuertes pendientes y procesos de erosioacuten intensos puede ser debido a la peacuterdida de semillas por es-correntiacutea y erosioacuten (Chambers y MacMahon 1994 Garciacutea-Fayos y Cerdagrave 1997) En pequentildeas cuencas abarrancadas del interior de Alicante las tasas anua-les de peacuterdida de semillas alcanzan un 13 (Garciacutea-Fayos et al 1995) Dado que la relacioacuten entre las peacuterdidas de semillas y la erosioacuten es exponencial (Garciacutea-Fayos 2004) la ocurrencia de eventos ex-traordinarios de lluvia durante el periodo de disper-sioacuten de las semillas podriacutea dificultar la regeneracioacuten de la vegetacioacuten en laderas sometidas a procesos de erosioacuten intensos como los taludes de infraestructu-ras lineales (veacutease Capiacutetulo 2)

Las caracteriacutesticas de las semillas tambieacuten influyen en su capacidad de resistir al arrastre por la erosioacuten Asiacute la segregacioacuten de una sustancia mucilaginosa que pega las semillas al suelo cuando se humede-cen disminuye notablemente la susceptibilidad de su arrastre por erosioacuten cuando su peso es inferior a 1 mg (Garciacutea-Fayos et al 2010)

2 Suelo (filtro abioacutetico)

a Importanciarelativadelosfiltrosdisponibilidaddesemillasfrenteacondicionesabioacuteticas

Aunque la colonizacioacuten de los taludes puede verse limitada por la restringida capacidad de dispersioacuten o de fijacioacuten al suelo de algunas especies distin-tos estudios han puesto de manifiesto la prepon-derancia del filtro abioacutetico frente al filtro de la dis-ponibilidad de semillas (dispersioacuten y fijacioacuten) Estos estudios demuestran que aunque las semillas de muchas especies son capaces de llegar a los taludes una serie de limitaciones ambientales intriacutensecas a estas laderas impiden su germinacioacuten o el estableci-miento de las plaacutentulas (Alborch et al 2003 Tormo et al 2006 Figura 4)

Figura 4 Experimento de adicioacuten de semillas en terraplenes de la Autoviacutea Andash3 a su paso por Requena (Comunidad Valenciana) que demuestra la preponderancia del filtro abioacutetico frente al filtro de la dispersioacuten Modificado a partir de Tormo et al 2006 Este experimento se basa en la idea de que si se antildeaden semillas de especies que no estaacuten presentes previamente en el talud pero siacute en su cercaniacutea y estas se estable-cen la limitacioacuten por la disponibilidad de semillas seriacutea maacutes importante para explicar su ausencia en dicho haacutebitat que la limitacioacuten por las condiciones del haacutebitat estudiado Se representa el porcentaje de establecimiento obtenido tras una siembra manual a pequentildea escala para un conjunto de especies ausentes de los taludes aunque presentes en las zonas circundantes de vegetacioacuten natural (especies lsquono exitosasrsquo en la colonizacioacuten espontaacutenea de los taludes) y para un conjunto de especies colonizadoras de los taludes que sirven de control (especies lsquoexitosasrsquo) Los resultados indican que a pesar de la siembra que asegura la llegada en una misma proporcioacuten de las semillas de todas las especies al talud las especies no exitosas muestran unas tasas de establecimiento mucho maacutes bajas que las especies exitosas (excepto para Mm y Pa) Estos resultados sugieren que los procesos posdispersivos (germinacioacuten y establecimiento de plaacutentulas) que dependen funda-mentalmente de las condiciones abioacuteticas tienen un papel maacutes limitante en la colonizacioacuten de los taludes que los procesos de dispersioacuten y de fijacioacuten de las semillas

b Condicionesgeneralesdelsuelodeterraplenesydesmontes(veacuteasetambieacutenCapiacutetulo4)

Las condiciones generales del suelo de los taludes habitualmente poco favorables al establecimiento de la vegetacioacuten representan el filtro abioacutetico funda-mental que condiciona en gran medida los resul-tados de la colonizacioacuten natural En la Tabla 1 se presentan datos de algunos paraacutemetros del suelo relevantes para el establecimiento de la vegetacioacuten

que han sido medidos en sistemas de taludes de distintas zonas de la Peniacutensula Ibeacuterica Dichas zo-nas corresponden a la autopista Andash7 a su paso por la Costa del Sol (Maacutelaga) con inviernos suaves y precipitaciones relativamente altas autoviacutea Andash3 a su paso por la zona de Requena (Valencia) con un clima continental y notable aridez y las carreteras Mndash12 y Mndash13 en la Comunidad de Madrid con un clima me-diterraacuteneo continental y una precipitacioacuten intermedia en relacioacuten con las anteriores

Ab- Avena barbata

Bu- Bromus rubens

Bd- Bromus diandrus

Ac- Anacyclus clavatus

Mm- Medicago minima

Pa- Plantago albicans

Be- Brachypodium retusum

Sc- Santolina chamaecyparissus

Mo- Medicago orbicularis

Gs- Genista scorpius

Pl- Plantago lanceolata

Ps- Plantago sempervirens

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oacuten d

e la

cub

ierta

vege

tal

IacuteNDICE

Tabla 1 Principales caracteriacutesticas del suelo y de la vegetacioacuten de distintos sistemas de taludes de la Peniacutensula Ibeacuterica (media plusmn error estaacutendar) Datos de Mola et al (2011) para Madrid de Valladares y Alonso (2001) para Maacutelaga y de Bochet et al (2010a) para Valencia

MADRID (CARRETERAS Mndash12 Y Mndash13)

MAacuteLAGA (AUTOPISTA Andash7)

VALENCIA (AUTOVIacuteA Andash3)

PROPIEDADES DE LA ZONA

Clima

Piso climaacutetico1

Ombroclima1

Mesomediterraacuteneo

Semiaacuterido

Termomediterraacuteneo

Subhuacutemedo

Mesomediterraacuteneo

Seco-semiaacuterido

Precipitacioacuten (mmantildeo)

500 900 450

Litologiacutea Arcosas Areniscas arenas arcillas y limos (sustrato aacutecido)

Margas (sustrato calizo)

PROPIEDADES DEL TALUD

TERRAPLEacuteN (N = 6)

DESMONTE (N = 9)

TERRAPLEacuteN (N = 21)

DESMONTE (N = 18)

TERRAPLEacuteN (N = 4)

DESMONTE (N = 4)

Edad (antildeos) 0 0 2 2 8 8

Pendiente (deg) 321 plusmn 08 312 plusmn 03 297 plusmn 37 396 plusmn 58 317 plusmn 23 363 plusmn 26

Orientacioacuten (deg)Norte este sur y oeste

Norte este sur y oeste

Norte y sur Norte y sur Norte y sur Norte y sur

Longitud (m) 118 plusmn 04 175 plusmn 09 119 plusmn 41 94 plusmn 45

Tratamiento TV ninguno TVHS HS HS HS

PROPIEDADES DEL SUELO

Arena () 6372 plusmn 268 6537 plusmn 549 3812 plusmn 746 3645 plusmn 107

Limo () 2011 plusmn 215 2259 plusmn 375 2748 plusmn 502 3423 plusmn 607

Materia orgaacutenica () 0148 plusmn 0023 00069 plusmn 0006 744 502 133 plusmn 019 lt0752 plusmn 006

Ntotal

() 0016 plusmn 002 0008 plusmn 0001 004 002 0072 plusmn 0004 0068 plusmn 0001P

asimilable (P2O5

mg100 g)181 plusmn 025 111 plusmn 368 443 103 250 plusmn 152 048 plusmn 010

K+ (mg100 g) 178 plusmn 06 167 plusmn 26 103 679

Compactacioacuten (kPa) 60 plusmn 10 1560 plusmn 1180

PROPIEDADES DE LA VEGETACIOacuteN

Cobertura vegetal () 000 plusmn 000 000 plusmn 000 803 plusmn 159 222 plusmn 224 594 plusmn 233 74 plusmn 56

Nuacutemero de especies 000 plusmn 000 000 plusmn 000 571 plusmn 93 336 plusmn 90 103 plusmn 84 100 plusmn 99

Indican que las diferencias entre terraplenes y desmontes de una misma zona geograacutefica son estadiacutesticamente signifi-cativas para la variable considerada ( P le 005 P le 001) TV = recubrimiento del talud con tierra vegetal HS= hidrosiembra con mezclas estaacutendares de semillas comerciales 1 Seguacuten clasificacioacuten de Rivas Martiacutenez (1983) 2 Maacutes bajo que el nivel de deteccioacuten del meacutetodo de anaacutelisis utilizado

Desde el punto de vista de las propiedades quiacutemi-cas del suelo los niveles de macronutrientes (N P K) medidos en los distintos sistemas de taludes son muy bajos (Tabla 1) Los niveles de macro-nutrientes y de materia orgaacutenica (propiedad con importantes implicaciones en la estructuracioacuten del suelo y en la capacidad de eacuteste para retener el agua) son inferiores a los niveles registrados en las zonas de vegetacioacuten natural proacuteximas a los talu-des Por ejemplo Mola et al (2011) constatan que el contenido en nitroacutegeno y materia orgaacutenica en el suelo de los terraplenes y desmontes de las carre-teras Mndash12 y Mndash13 (Madrid) al finalizar la obra y tras la aplicacioacuten de tierra vegetal en el caso de los terraplenes (Tabla 1) fueron del orden de 10 veces menores que los registrados en pastizales y mato-rrales xerofiacuteticos locales (Acosta 2005 Peco et al 2006) Estas marcadas diferencias en la fertilidad del suelo entre los taludes y las zonas proacuteximas de vegetacioacuten natural podriacutean explicar al menos en parte la escasa adaptacioacuten de las especies del pool local a las condiciones adversas del suelo de los taludes

Asimismo cabe destacar que las condiciones abioacuteti-cas de los desmontes son mucho menos favorables para el establecimiento de la vegetacioacuten que las de los terraplenes Mola et al (2011) encontraron di-ferencias significativas en el contenido en materia orgaacutenica foacutesforo y nitroacutegeno (Tabla 1) entre terraple-nes y desmontes recieacuten construidos de similar pen-diente y orientacioacuten en las carreteras Mndash12 y Mndash13 Los valores fueron superiores en los terraplenes ex-cepto para el foacutesforo Estas diferencias se debieron principalmente al extendido de tierra vegetal en los terraplenes el cual sin embargo no suele realizarse en los desmontes Bochet et al (2010a) obtuvieron resultados similares 8 antildeos despueacutes de la finali-zacioacuten de la obra en taludes de la Autoviacutea Andash3 de similar orientacioacuten y pendiente mostrando niveles superiores de materia orgaacutenica foacutesforo asimilable y nitroacutegeno en los terraplenes en comparacioacuten con los desmontes (Tabla 1)

Ademaacutes como consecuencia de los diferentes ma-teriales de origen entre desmontes y terraplenes (roca madre sin meteorizar frente a material no consolidado acumulado respectivamente) el nivel de compactacioacuten del suelo es muy superior en los desmontes En los desmontes de la Autoviacutea Andash3 en la Comunidad Valenciana se han llegado a medir niveles medios de compactacioacuten altiacutesimos (1560 kPa) 25 veces superiores a los niveles medidos en terraplenes de similar pendiente y orientacioacuten de la

misma localidad (Tabla 1 Figura 5) En desmontes de 50deg de pendiente formados sobre gneis en una zona de clima atlaacutentico en Galicia Cano y Montalvo (2003) registraron niveles de compactacioacuten del sue-lo algo maacutes bajos (300-400 kPa) pero cercanos al umbral que determina la capacidad de las raiacuteces de muchas especies herbaacuteceas no cultivadas para pe-netrar en un sustrato (Basset et al 2005 Monsalve et al 2010)

Figura 5 Diferencias en la estructura del suelo de terraplenes y desmontes de la Autoviacutea Andash3 a la altura de Requena (Valencia) En los primeros centiacutemetros de profundidad el nivel de com-pactacioacuten del suelo es mayor en los desmontes El aporte de materia orgaacutenica al suelo por las plantas (hojarasca y raiacuteces) confiere una mayor estructura al suelo de los terraplenes (Foto Esther Bochet)

c Disponibilidaddeaguaenelsuelo

El agua en el suelo y su disponibilidad para las plantas merece una mencioacuten especial dada su relevancia en las dos fases maacutes criacuteticas de la colo-nizacioacuten la germinacioacuten y la supervivencia de las plaacutentulas en las primeras etapas posgerminativas

En los taludes de zonas semiaacuteridas donde la dis-ponibilidad de agua es reducida (excepto en los te-rraplenes mejor orientados) se ha encontrado una relacioacuten consistente entre el eacutexito colonizador de las especies y la capacidad de estas para germinar raacute-pidamente en condiciones de estreacutes hiacutedrico (Bochet et al 2007b) Asiacute las especies capaces de colonizar espontaacuteneamente y de forma abundante los talu-des de la Autoviacutea Andash3 en la zona de Requena son aquellas que han demostrado tener la mayor tasa y velocidad de germinacioacuten en condiciones de estreacutes hiacutedrico (Figura 6)

TERRAPLEacuteN DESMONTE

113112

Proc

esos

eco

loacutegi

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IacuteNDICE

Figura 6 Tasa (barras) y velocidad (liacuteneas nuacutemero de diacuteas hasta observar la primera germinacioacuten) de germinacioacuten en diferentes condiciones de estreacutes hiacutedrico de especies lsquoexitosasrsquo y lsquono exitosasrsquo en la colonizacioacuten espontaacutenea de los taludes Cuanto maacutes negativo es el potencial hiacutedrico mayor es el estreacutes Las especies exitosas muestran mayores tasas y velocidades de germinacioacuten que las especies no exitosas Modi-ficado a partir de Bochet et al 2007b

La distribucioacuten de la precipitacioacuten en el tiempo tam-bieacuten puede influir en el eacutexito de establecimiento de las especies anuales colonizadoras de taludes Asiacute Espigares y Peco (1993 1995) pusieron de manifies-to en un estudio sobre un amplio grupo de espe-cies arvenses de pastizal mediterraacuteneo respuestas diferentes en funcioacuten del momento en que se pro-duciacutean las precipitaciones otontildeales (Figura 7) Dado que muchas de estas especies son comunes en los taludes sobre sustratos aacutecidos en Madrid (Tabla 1) y que las comunidades de taludes suelen estar domi-nadas por especies anuales (veacutease apartado III4) la

respuesta de las plantas a la distribucioacuten temporal de la precipitacioacuten otontildeal podriacutea ser en gran me-dida responsable de las importantes fluctuaciones interanuales que se registran en la composicioacuten flo-riacutestica de estos ecosistemas en ambientes medite-rraacuteneos semiaacuteridos En un estudio a largo plazo (16 antildeos) Peco et al (2009) concluyeron ademaacutes que el peso de la semilla es un buen descriptor de la respuesta de las especies anuales a la precipitacioacuten y temperatura Asiacute las especies con semillas maacutes pesadas presentan ventajas en los antildeos con otontildeos poco lluviosos

Grupo 1 Grupo 2 Grupo 3

100 100 100

g

erm

inac

ioacuten

g

erm

inac

ioacuten

g

erm

inac

ioacuten

0 0 00 1 2 3 4 5 0 1 2 3 4 5 0 1 2 3 4 5

Tiempo (semanas) Tiempo (semanas) Tiempo (semanas)

Figura 7 Experimento en caacutemara de cultivo que pone de manifiesto las distintas respuestas en el tiempo de un amplio grupo de especies arvenses a la distribucioacuten de la precipitacioacuten otontildeal Tratamientos Lluvias otontildeales tempranas lluvia con temperatura y fotoperiacuteodo de sep-tiembre (liacutenea roja) Lluvias otontildeales tardiacuteas lluvia con temperatura y fotoperiacuteodo de noviembre (liacutenea azul) Los resultados indican que en los antildeos con lluvias tempranas en el otontildeo se ven favorecidas las especies del grupo 2 mientras que en otontildeos tardiacuteos se ven favorecidas las del grupo 3 El grupo 1 es poco sensible a estos cambios en la distribucioacuten de la precipitacioacuten con tasas de germinacioacuten elevadas para ambos tratamientos A partir de Espigares y Peco (1993)

Porc

enta

je d

e ge

rmin

acioacute

n

Diacutea

s ha

sta

la g

erm

inac

ioacuten

Potencial hiacutedrico del suelo (MPa)

Exitosa

No exitosa

0 20

40

60

80

10

0

0 -001 -005 -035

0 15

30

En cuanto a la supervivencia de las plaacutentulas tras la germi-nacioacuten Espigares y Peco (1995) determinaron que algunas

especies del experimento de la Figura 7 son particular-mente sensibles a una sequiacutea posgerminativa (Tabla 2)

Aira caryophyllea

Crepis virens

Vulpia ciliata

Capsella rubella

Crassula tillaea

Sagina apetala

Trifolium dubium

Vulpia muralis

Geranium molle

Tuberaria guttata

Galium murale

Myosotis stricta

Myosotis discolor

Anthyllis cornicina

Leontodon taraxa-coides

Galium parisiene

Spergularia purpurea

Andryala integrifolia

Bromus madritensis

Spergula pentandra

Crepis taraxacifolia

Trifolium tomentosum

Bromus hordeaceus

Plantago coronopus

Lathyrus angulatus

Vulpia unilateralis

Trifolium campestre

Aphanes microcarpa

Cerastium glomeratum

Papaver hybridum

Evax carpetana

Logfia gallica

Veronica arvensis

Biserrula pelecinus

Hypochoeris glabra

Poa annua

Trifolium cherleri

Plantago afra

Vicia lathyroides

Vulpia myuros

Campanula erinus

Logfia minima

Mibora minima

Stellaria media

Taeniatherum caput-medusae

Filago pyramidata

Trifolium glomeratum

Asteriscus aquaticus

Carduus tenuiflorus

Centaurea melitensis

Trifolium arvense

Erodium cicutarium

Trifolium cernuum

Vulpia membranacea

Corynephorus fasciculatus

Sisymbrium runcinatum

Polycarpon tetraphyllum

Cerastium brachypetalum

Arenaria leptoclados

Trifolium scabrum

Trifolium striatum

Bromus tectorum

Plantago loeflingii

Lophochloa cristata

Cerastium semidecandrum

Medicago minima

Trifolium gemellum

Scandix australis

Trifolium suffocatum

115114

Proc

esos

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oacuten d

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IacuteNDICE

Tabla 2 Listado de especies sensibles a las sequiacuteas posgerminativas A partir de Espigares y Peco (1995) Experimento en caacutemara de cultivo para simular el efecto de una sequiacutea postgerminativa en la tasa de mortalidad (media plusmn error estaacutendar) de plaacutentu-las de herbaacuteceas anuales En la tabla aparece la mortalidad en macetas con sequiacutea posger-minativa frente al control con riego continuo En todos los casos en que hubo diferencias significativas la mortalidad fue menor en los controles

TRATAMIENTOS

ESPECIES CONTROL SEQUIacuteA P

Aphanes microcarpa 004 plusmn 001 065 plusmn 006

Arenaria leptoclados 008 plusmn 005 040 plusmn 009

Biserrula pelecinus 015 plusmn 004 044 plusmn 009

Bromus hordeaceus 000 plusmn 000 056 plusmn 019

Cerastium semidecandrum 008 plusmn 005 059 plusmn 008

Galium murale 008 plusmn 008 073 plusmn 009

Galium parisiense 019 plusmn 006 087 plusmn 004

Hypochoeris glabra 000 plusmn 000 054 plusmn 014

Polycarpon tetraphyllum 000 plusmn 000 041 plusmn 013

Sagina apetala 001 plusmn 001 077 plusmn 005

Spergularia purpurea 004 plusmn 005 051 plusmn 007

Trifolium arvense 000 plusmn 000 070 plusmn 018

Trifolium glomeratum 000 plusmn 000 086 plusmn 001

Trifolium suffocatum 002 plusmn 002 056 plusmn 009

Veronica arvensis 002 plusmn 001 052 plusmn 009

Vulpia ciliata 004 plusmn 001 033 plusmn 007

Vulpia membranacea 000 plusmn 000 080 plusmn 005

Vulpia muralis 002 plusmn 001 034 plusmn 007

Vulpia myuros 003 plusmn 001 048 plusmn 010

P le 005 P le 001

En resumen las malas condiciones del suelo de los taludes tanto quiacutemicas fiacutesicas como hidroloacutegicas confieren al filtro abioacutetico un papel fundamental en el ensamblaje de las especies de las comunidades de plantas de estas laderas Ademaacutes el caraacutecter maacutes

limitante del suelo de los desmontes en compara-cioacuten con el de los terraplenes queda reflejado en la menor cobertura vegetal y nuacutemero de especies regis-trados en los desmontes al poco tiempo de finalizar la obra (Tabla 1 Figura 8)

Figura 8 Diferencias en la densidad de cobertura vegetal al-canzada en un desmonte (izquierda) y un terrapleacuten (derecha) proacuteximos a la Autoviacutea Andash3 (Requena Valencia) Las diferencias se deben principalmente a la orientacioacuten (norte en este caso concreto) y condiciones del suelo maacutes favorables para el estab-lecimiento de las plantas en el terrapleacuten El establecimiento de las plantas en el desmonte orientado hacia el sur es praacutectica-mente nulo (Foto Esther Bochet)

3 Interacciones planta-planta (filtro bioacutetico)

a Importanciarelativadelosfiltroscondicionesabioacuteticasfrenteacondicionesbioacuteticas

Mientras que en ambientes semiaacuteridos con una re-ducida disponibilidad hiacutedrica para las plantas las condiciones abioacuteticas constituyen inicialmente el filtro maacutes importante a la hora de estructurar la composicioacuten floriacutestica de las comunidades de talu-des en ambientes climaacuteticos maacutes benignos son las interacciones entre plantas las que desempentildean un papel primordial Valladares et al (2008) emplea-ron una aproximacioacuten basada en la filogenia y en el anaacutelisis de rasgos funcionales de las especies (Webb et al 2002) para comparar las comunidades vegetales establecidas en los taludes de carretera de Maacutelaga (clima mediterraacuteneo benigno Tabla 1) y Valencia (clima mediterraacuteneo adverso Tabla 1) Dicho estudio sugiere la existencia de repulsioacuten fe-notiacutepica y por lo tanto exclusioacuten competitiva en las comunidades vegetales de los taludes de carre-tera de Maacutelaga Al contrario en las comunidades de Valencia sometidas a un alto estreacutes ambiental se aprecia una atraccioacuten fenotiacutepica entre las es-pecies coexistentes al compartir muchas de ellas unos mismos rasgos que les confieren la capacidad necesaria para poder establecerse en esos ambien-tes adversos

b Competenciafrenteafacilitacioacuten

Hasta la fecha existe poca informacioacuten sobre la natu-raleza de las interacciones planta-planta que se pro-ducen en las comunidades de taludes asiacute como sobre su importancia relativa (facilitacioacuten frente a compe-tencia) en el ensamblaje de las especies de dichas comunidades Dado que se ha descrito que la impor-tancia relativa de la competencia frente a la facilita-cioacuten disminuye a medida que aumenta el estreacutes abioacute-tico (Bertness y Callaway 1994 Maestre et al 2009) cabe esperar una elevada frecuencia de interacciones positivas en los ecosistemas de taludes al menos en las condiciones abioacuteticas maacutes limitantes para el esta-blecimiento de las plantas (por ejemplo clima aacuterido o semiaacuterido sustratos pobres y compactados)

4 El producto final del proceso de filtrado las especies colonizadoras y sus rasgos funcionales

Finalmente las especies que consiguen superar con eacutexito los sucesivos filtros que controlan el ensam-blaje de las especies constituyen el pool de especies colonizadoras de los taludes cuyos rasgos funciona-les reflejan su capacidad para llegar germinar esta-blecerse y competir en el talud

a Pooldeespeciesdelostaludes

Un estudio sinteacutetico sobre la flora y la ecologiacutea de las comunidades de taludes de las zonas de Maacutelaga (Autopista Andash7) Valencia (Autoviacutea Andash3) y Madrid (Ra-dial Rndash4 Autopista APndash36 y Autoviacutea Andash5) sentildeala que de forma general estas comunidades son muy ricas en especies y estaacuten compuestas por plantas her-baacuteceas principalmente (Valladares et al 2004) Sus valores de diversidad llegan a alcanzar los maacuteximos registrados en herbazales y pastizales de la Peniacutensu-la Ibeacuterica (Figura 9) Aunque las comparaciones entre haacutebitats basaacutendose en datos de diversidad o riqueza estaacuten sujetas a limitaciones y no son directamente comparables entre siacute los datos obtenidos en dicho estudio y otros (Garantildeeda-Bermejo et al 2002 Tena 2006 Garciacutea-Palacios et al datos no publicados) nos indican que transcurrido un tiempo relativamen-te pequentildeo las comunidades que se instalan de for-ma espontaacutenea en los taludes son ricas en especies lo que cuestiona la necesidad de introducir especies aloacutectonas como las que se seleccionan habitualmen-te en las hidrosiembras (veacutease apartado IV3) Ade-maacutes esta diversidad aumenta progresivamente con el tiempo (Tena 2006 Garciacutea-Palacios et al datos no publicados Figura 10)

117116

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IacuteNDICE

Figura 9 Iacutendice de diversidad floriacutestica (iacutendice de Shannon) de distintas comunidades de herbazales y pastizales de la Peniacutensula Ibeacuterica En rojo se destacan los valores promedio para herbazales de taludes de carreteras estudiadas por nosotros en Maacutelaga y Madrid Extraiacutedo de Valladares et al 2004

La mayoriacutea de las especies de las comunidades de taludes de Maacutelaga Madrid y Valencia estaacute presente en una sola de las tres localidades estudiadas (399 de un total de 587 especies) y tan solo el 10 es-taacuten presente en las tres localidades (Valladares et al 2004) No obstante estas uacuteltimas son las que maacutes abundancia media poseen a nivel local siendo las

menos abundantes las presentes en una sola loca-lidad Por ello aunque existan grandes diferencias desde el punto de vista de la composicioacuten floriacutestica entre las tres zonas en teacuterminos de dominancia re-lativa las diferencias son menores ya que tienden a predominar las mismas especies Muchas de ellas tambieacuten han sido encontradas de forma abundante

en otras comunidades de taludes de las provincias de Zamora y Madrid (Enriacutequez de Salamanca et al 2004) Salamanca (Martiacutenez-Ruiz et al 2003) y del sur de Francia (Heindl y Ullman 1991) en ambiente medi-terraacuteneo (pe Avena barbata Avena sterilis Bromus rubens Bromus tectorum Cichorium intybus Foenicu-lum vulgare Hordeum murinum Plantago albicans)

Figura 11 Segregacioacuten de inventarios por la composicioacuten floriacutestica en funcioacuten del tipo (Eje 1) y orientacioacuten (Eje 2) del talud Color azul terra-plenes color marroacuten desmontes colores oscuros norte colores claros sur Modificado a partir de Bochet y Garciacutea-Fayos 2004

A modo de ejemplo la Tabla 3 propone un listado de especies capaces de colonizar espontaacuteneamente con eacutexito unos taludes de la Autoviacutea Andash3 situados en la Comunidad Valenciana entre las localidades de El Rebollar y Venta del Moro Mientras que algunas especies tuvieron eacutexito en todos los taludes estu-diados en esta zona otras solo fueron capaces de establecerse en un tipo u orientacioacuten de talud

Eje 1

Eje

2

094

041

-012

-065

-118

-103 -029 045 119 193

Terrapleacuten norte

Desmonte norte

Terrapleacuten sur

Desmonte sur

Madrid Maacutelaga

1 2 3 4 5

Pastos mediterraacuteneos ecotono matorral (Madrid) Prados de siega huacutemedos (Picos de Europa)

Herbazales en taludes en carretera 4-16 antildeos (Madrid) Pastos en dehesa Quercus pyrenaica (Leoacuten)

Prados de siega huacutemedos (Pirineos) Pastizales en quejigares (Navarra)

Pastos semiaacuteridos (Salamanca) Herbazales en quejigares (Navarra)

Pastos en dehesa Quercus ilex semiagostantes (Salamanca) Pastos terofiacuteticos (Zamora)

Pastos psicroxerofiacuteticos (Salamanca) Espartales sobre calizas (Jaeacuten) Espartales sobre yesos (Jaeacuten)

Herbazales en taludes de carretera 2-3 antildeos (Maacutelaga) Pastizales vallicares (Salamanca)

Herbazales en taludes de carretera 1-2 antildeos (Maacutelaga) Prados de siega en zonas secas (Pirineos) Prados de siega muy manejados (Pirineos)

Prados de siega (Zamora)

Figura 10 Variacioacuten en la riqueza de especies en funcioacuten de la edad de las comunidades de dos sistemas distintos de taludes de carretera situados en las provincias de Madrid y Maacutelaga Datos de Garciacutea-Palacios et al (datos no publicados)

La composicioacuten floriacutestica de las comunidades tam-bieacuten variacutea entre terraplenes y desmontes y entre orientaciones norte y sur (Martiacutenez-Ruiz et al 2003 Bochet y Garciacutea-Fayos 2004) como consecuencia de

las distintas influencias relativas de los filtros eco-loacutegicos sobre las especies y sus rasgos funcionales (Figura 11)

Nordm

espe

cies

m2

Nordm

espe

cies

m2

18

16

14

12

10

8

6

4

2

0

18

16

14

12

10

8

6

4

2

0

aa

a

b

b

b

Referencialt0-2 antildeos 7-9 antildeos 20 antildeos Referencialt0-2 antildeos 7-9 antildeos 20 antildeos

119118

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IacuteNDICE

GEacuteNERO TRIFOLIUM

De las 60 especies de treacuteboles (Trifolium) descritas en Flora Ibeacuterica (Muntildeoz Rodriacuteguez et al 2000) 39 aparecen en el cataacutelogo de la flora de Madrid (Loacute-pez Jimeacutenez 2007) En 15 parcelas de muestreo en taludes de las autopistas M-12 y M-13 se han identificado 18 es decir el 25 de la riqueza ibeacuterica y maacutes del 46 de la de la Comunidad de Madrid Estas cifras ponen en evidencia lo diversificado de este geacutenero botaacutenico en la Peniacutensula Ibeacuterica y lo bien representado en la flora presente en los taludes de carretera Se presentan catorce especies de este geacutenero detectadas en taludes de carretera

Muntildeoz Rodriacuteguez A JA Devesa y S Talavera 2000 Trifolium in Castroviejo et al (Ed) Flora Ibeacuteri-ca Plantas vasculares de la Peniacutensula Ibeacuterica e Islas Baleares 7(2)646-719 CSIC Madrid

Loacutepez Jimeacutenez N 2007 Las plantas vasculares de la Comunidad de Madrid Cataacutelogo floriacutestico Claves dicotoacutemicas y estudio detallado de la familia Com-positae Giseke Tesis Doctoral Universidad Complu-tense de Madrid

De izquierda a derecha y de arriba abajo treacutebol blanco (Trifolium repens) treacutebol (T scabrum) treacutebol velloso (Trifolium hirtum) fenarda (T campestre) jopito (T angustifolium) pie de liebre (T arvense) siempreviva (T tomentosum) treacutebol (T glomeratum) y rabo de gato (T cherleri) Autor Ignacio Mola

121120

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IacuteNDICE

Bajo estas liacuteneas de izquierda a derecha y de arriba abajo treacutebol (Trifolium strictum) estrella (T stella-tum) treacutebol (T cernuum) y treacutebol estriado (T stria-tum) En la paacutegina siguiente berrillo (T pratense) Autores Miguel Aacutengel Casado e Ignacio Mola

123122

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IacuteNDICE

Tabla 3 Listado de especies con sus mecanismos de dispersioacuten respectivos que colonizan espontaacuteneamente y de forma abundante los distintos tipos de taludes de la Autoviacutea A3 situados entre las localidades de El Rebollar y Venta del Moro (Comunidad Valenciana) Esta zona se caracteriza por un clima continental semiaacuterido y un sustrato de margas calizas

ESPECIES DISPERSIOacuteN DS DN TS TN

Alyssum simplex Baroacutecora + + + +

Anacyclus clavatus Baliacutestica + + + +

Avena barbata Anemoacutecora + + + +

Bromus rubens Anemoacutecora + + + +

Centaurea aspera Zooacutecora + + + +

Cichorium intybus Baliacutestica + + + +

Convolvulus arvensis Baroacutecora + + + +

Diplotaxis erucoides Baroacutecora + + + +

Euphorbia serrata Mirmecoacutecora + + + +

Hordeum murinum subsp leporinum Anemoacutecora + + + +

Sonchus oleraceus Anemoacutecora + + + +

Scabiosa simplex Anemoacutecora + + + +

Bromus tectorum Anemoacutecora + + +

Crepis vesicaria Anemoacutecora + + +

Erodium cicutarium Baroacutecora + + +

Calendula arvensis Zooacutecora + +

Carduus pycnocephalus Anemoacutecora + +

Filago pyramidata Anemoacutecora + +

Medicago minima Zooacutecora + +

Plantago albicans Baroacutecora + +

Scorzonera laciniata Anemoacutecora + +

Silene nocturna Baliacutestica + +

Reseda phyteuma Baliacutestica + +

Pallenis spinosa Anemoacutecora + +

Eryngium campestre Anemoacutecora + +

Carthamus lanatus Anemoacutecora +

Crepis foetida Anemoacutecora +

ESPECIES DISPERSIOacuteN DS DN TS TN

Foeniculum vulgare subsp piperitum Baroacutecora +

Linaria simplex Baliacutestica +

Papaver rhoeas Baliacutestica +

Senecio gallicus Anemoacutecora +

Senecio vulgaris Anemoacutecora +

Avena sterilis Anemoacutecora +

Erodium ciconium Baroacutecora +

Erodium malacoides Baroacutecora +

Hirschfeldia incana Baroacutecora +

Reseda undata Baroacutecora +

Aegilops geniculata Zooacutecora +

Aegilops triuncialis Zooacutecora +

Genista scorpius Baroacutecora +

Santolina chamaecyparissus subsp squarrosa Baliacutestica +

b Rasgosfuncionalesdelasespeciescolonizadoras

Seguacuten predice la teoriacutea los rasgos funcionales de las especies colonizadoras de taludes deberiacutean re-flejar las aptitudes de las plantas para superar las barreras que controlan el ensamblaje de las especies en estas laderas (dispersioacuten fijacioacuten germinacioacuten establecimiento y competencia)

Las comunidades de taludes tiacutepicas de las primeras etapas sucesionales se caracterizan por poseer una alta proporcioacuten de especies anuales de crecimiento raacutepido de caraacutecter ruderal y arvense (Valladares et al 2004 Figura 12) Por ejemplo las comunidades de taludes de Maacutelaga estaacuten compuestas en los prime-ros antildeos por un 84 de especies anuales (teroacutefitas seguacuten la clasificacioacuten de Raunkiaer 1934) frente a un 11 de especies herbaacuteceas vivaces (hemicriptoacutefitas seguacuten la clasificacioacuten de Raunkiaer 1934) A su vez un 40 de las especies son ruderales y arvenses

Figura 12 Primeras etapas de la sucesioacuten en un terrapleacuten de la Autoviacutea Andash3 (Requena Valencia) Una de las especies pioneras de mayor eacutexito en la colonizacioacuten de este tipo de talud es la especie anual Diplotaxis erucoides (flor blanca) (Foto Esther Bochet)

frente a un 25 de especies propias de pastizales y herbazales nitroacutefilos (Matesanz et al 2004)

Tabla 3 Listado de especies con sus mecanismos de dispersioacuten respectivos que colonizan espontaacuteneamente y de forma abundante los distintos tipos de taludes de la Autoviacutea A3 situados entre las localidades de El Rebollar y Venta del Moro (Comunidad Valenciana) Esta zona se caracteriza por un clima continental semiaacuterido y un sustrato de margas calizas (Continuacioacuten)

DN desmonte norte DS desmonte sur TN terrapleacuten norte TS terrapleacuten sur Mecanismos de dispersioacuten anemoacutecora por el viento baroacutecora por la gravedad zooacutecora por los animales excepto por las hormigas mirmecoacutecoras por las hormigas baliacutesticas por lsquocatapultarsquo Modificado a partir de Bochet et al 2010b

DN desmonte norte DS desmonte sur TN terrapleacuten norte TS terrapleacuten sur Mecanismos de dispersioacuten anemoacutecora por el viento baroacutecora por la gravedad zooacutecora por los animales excepto por las hormigas mirmecoacutecoras por las hormigas baliacutesticas por lsquocatapultarsquo Modificado a partir de Bochet et al 2010b

125124

Proc

esos

eco

loacutegi

cos

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stau

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oacuten d

e la

cub

ierta

vege

tal

IacuteNDICE

Al igual que en otros ecosistemas degradados las especies pioneras en la colonizacioacuten de taludes de infraestructuras lineales se caracterizan tambieacuten por un sistema de dispersioacuten eficaz a larga distancia que les permite llegar desde las aacutereas circundan-tes de vegetacioacuten natural y de mecanismos de fi-jacioacuten al sustrato Asiacute en taludes de ocho antildeos de edad en la Autoviacutea Andash3 (Comunidad Valenciana) se ha observado una sobrerrepresentacioacuten de especies anemoacutecoras en relacioacuten con las zonas adyacentes de vegetacioacuten natural (Bochet et al 2007a Tabla 3) Tambieacuten en laderas erosionadas de una zona semiaacuterida de Teruel con caracteriacutesticas similares y

que comparten muchas especies con los desmontes de la Autoviacutea Andash3 estudiados en Valencia se han encontrado preferentemente especies capaces de dispersarse a larga distancia y de producir muciacutelago al contacto con el agua (Bochet et al 2009) Estas especies se distinguen de las de las zonas circun-dantes de vegetacioacuten natural que son incapaces de superar los filtros por su gran inversioacuten de recursos en la produccioacuten de semillas A medida que avanza la sucesioacuten cabe esperar que aumente la proporcioacuten de especies que disponen de estrategias de resis-tencia con una mayor inversioacuten por ejemplo en los oacuterganos subterraacuteneos (Guerrero-Campo et al 2008)

IV APLICACIOacuteN A LA RESTAURACIOacuteN

La restauracioacuten puede considerarse como un esfuerzo de manipulacioacuten consciente de los filtros ecoloacutegicos con el objetivo de acelerar o dirigir el proceso de coloniza-cioacuten vegetal (Figura 13) Por lo tanto la identificacioacuten de

La intervencioacuten activa sobre los filtros es necesaria cuando los procesos de colonizacioacuten transcurren demasiado lentamente para poder alcanzar en un plazo aceptable los objetivos de la restauracioacuten o cuando el sistema ha sobrepasado un umbral de irreversibilidad (Halle y Fattorini 2004) Este uacuteltimo determina la capacidad del sistema para recuperarse por siacute mismo La perturbacioacuten sufrida por los ecosistemas durante las obras es tal que en la mayoriacutea de los casos se supera el umbral de irreversibilidad

A continuacioacuten y sobre la base de los resultados obtenidos por distintos grupos de investigacioacuten se describen en distintos tipos de actuaciones que permiten contrarrestar el efecto de los filtros fa-voreciendo la entrada y el establecimiento de las plantas (Figura 13)

1 Proximidad y calidad de la vegetacioacuten natural circundante

La presencia de aacutereas de vegetacioacuten natural en la proximidad de los taludes que actuacutean como fuen-tes de semillas puede ayudar a paliar los efectos del filtro de la dispersioacuten puesto que favorece la entrada espontaacutenea de especies desde la vegeta-cioacuten circundante y acelera los procesos de coloni-zacioacuten en el talud Cuanto maacutes proacuteximos esteacuten los taludes de la matriz de vegetacioacuten circundante mayor seraacute la llegada y disponibilidad de semillas en el talud

Matesanz et al (2006) demuestran la efectividad de la colonizacioacuten espontaacutenea desde las zonas cercanas de matorral y cultivos en unos terraple-nes de la Autopista Andash7 en Maacutelaga con pendientes inferiores a 27deg suelos relativamente ricos y airea-dos y con un clima mediterraacuteneo subhuacutemedo Es-tos autores obtuvieron en terraplenes no tratados de reciente construccioacuten y al menos durante los dos primeros antildeos una cobertura vegetal y una riqueza de especies elevadas similares a las que se alcanzaron aplicando una hidrosiembra con una mezcla de especies comerciales (Figura 14)

los filtros ecoloacutegicos maacutes limitantes para el estableci-miento de la vegetacioacuten como paso previo a la toma de decisiones en un proyecto determinado es sumamente importante para el eacutexito de cualquier restauracioacuten

Pool local

Pool dispersivo

Pool actual

Limitaciones abioacuteticas

Incapaces de germinar y establecerse

Incapaces de llegar

Incapaces de competir

Adicioacuten de especies

Intervencioacuten en las interacciones bioacuteticas

Pool ambiental

- Aporte de tierra vegetal mulches fertilizantes enmiendas orgaacutenicas

- Cambios topograacuteficos

- Proximidad de la vegetacioacuten natural

- Aporte de tierra vegetal

- Seleccioacuten adecuada de especies para hidrosiembras plantaciones

- Eliminacioacuten de ganado

ENSAMBLAJE DE LAS ESPECIES Y FILTROS MANIPULACIOacuteN DE LOS FILTROS (RESTAURACIOacuteN)

Modificacioacuten del medio

Limitaciones bioacuteticas

Limitaciones por dispersioacuten

Figura 13 Proceso de seleccioacuten y ensamblaje de las especies en comunidades a traveacutes de los tres filtros ecoloacutegicos y posibles medidas de restauracioacuten mediante manipulacioacuten de dichos filtros Los rectaacutengulos representan los pools de especies los ciacuterculos los filtros y las flechas gruesas las posibles intervenciones del hombre para contrarrestar el efecto de los filtros

0

2

4

6

8

10

12

14

16

Nuacutem

ero

de e

spec

ies

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80

100

2003 2004

Cob

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ra v

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)

Antildeo de seguimiento

A) B)

2003 2004Antildeo de seguimiento

Con hidrosiembra Sin hidrosiembra

0

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4

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12

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16

Nuacutem

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80

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2003 2004

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)

Antildeo de seguimiento

A) B)

2003 2004Antildeo de seguimiento

Con hidrosiembra Sin hidrosiembra

Figura 14 Influencia de la hidrosiembra (frente a la restauracioacuten pa-siva) en la cobertura vegetal y riqueza de especies de terraplenes de la Autoviacutea Andash7 (Maacutelaga) No se aprecian grandes diferencias entre los tratamientos 2 y 3 antildeos tras la hidrosiembra (2003 y 2004 respec-tivamente) Modificado a partir de Matesanz et al 2006

A

B

127126

Proc

esos

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loacutegi

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vege

tal

IacuteNDICE

La importante contribucioacuten de las manchas cir-cundantes de vegetacioacuten natural a la colonizacioacuten de los taludes tambieacuten queda reflejada en las Fi-guras 15 y 16 en las que se aprecian cambios en la composicioacuten floriacutestica de las comunidades de terraplenes de 0-2 7-9 y 20 antildeos de las au-topistas de Madrid y de Maacutelaga Los resultados

de este estudio (Garciacutea-Palacios et al datos no publicados) sugieren que la cercaniacutea de manchas formadas por dehesas de Retama sphaerocarpa en Madrid y matorrales de Chamaerops humilis y Ulex parviflorus en Maacutelaga constituye uno de los mo-tores principales para guiar la sucesioacuten de estas comunidades

Figura 15 Cambios en la composicioacuten floriacutestica en distintos taludes de Madrid (A) y Maacutelaga (B) de edades comprendidas entre 0 y 20 antildeos Tambieacuten se incluye la composicioacuten floriacutestica de la vegetacioacuten natural circundante llamada lsquoreferenciarsquo en ambas localidades (dehesa de Retama sphaerocarpa para Madrid y matorrales de Chamaerops humilis y Ulex parviflorus para Maacutelaga) Los dos ejes (CAP 1 y CAP 2) son el resultado de una ordenacioacuten (anaacutelisis canoacutenico de coordenadas principales) realizada para representar graacuteficamente la composicioacuten de la vegetacioacuten La distancia entre puntos representa la similitud en la composicioacuten floriacutestica Datos de Garciacutea-Palacios et al (datos no publicados)

Bochet et al (2007a) recomiendan que durante la ejecucioacuten de las obras se mantenga una banda de vegetacioacuten natural de al menos 20 m de ancho en la cabecera o al pie de los taludes Ademaacutes de tener implicaciones beneficiosas evidentes en el caso de la restauracioacuten pasiva estas medidas contribuyen tambieacuten a mejorar los resultados de los proyectos

de restauracioacuten activa acelerando el proceso de co-lonizacioacuten En caso de ausencia de vegetacioacuten natu-ral circundante o de llegada insuficiente de semillas al talud se pueden aplicar otras medidas que per-mitan incorporar las semillas de forma activa como la adicioacuten de tierra vegetal o la hidrosiembra (apar-tados IV2 y 3 respectivamente)

Figura 16 Cronosecuencia de terraplenes de distinta edad (de 0 a 20 antildeos) en diversas autopistas de las provincias de Madrid y Maacutelaga Las uacuteltimas dos fotos representan las zonas circundantes de vegetacioacuten natural una dehesa de Retama sphaerocarpa para Madrid y matorrales de Chamaerops humilis y Pistacia lentiscus para Maacutelaga (Fotos Santiago Soliveres Codina y Pablo Garciacutea-Palacios)

MADRID MAacuteLAGA

0-2

7-9

gt20

referencia

A B02

01

00

-01

-02

02

01

00

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-02

-02 -01 -01 00 00 01 01 02 02 -02 -01 -01 00 00 01 01 02 02

CAP1 CAP1

CA

P2

0-2 antildeos7-9 antildeos20 antildeosReferencialt

129128

Proc

esos

eco

loacutegi

cos

y re

stau

raci

oacuten d

e la

cub

ierta

vege

tal

IacuteNDICE

2 Mejora del suelo y banco de semillas

Las limitaciones abioacuteticas pueden ser suplidas mediante distintas teacutecnicas de restauracioacuten que consisten en la aplicacioacuten en los taludes de mul-ches (Brofas y Varelides 2000) fertilizantes (Pe-tersen et al 2004) enmiendas orgaacutenicas (de Ona y Osorio 2006) o tierra vegetal (Balaguer 2002) (veacutease Capiacutetulo 63) Entre las diferentes medidas

Un gran nuacutemero de estudios en ambientes de ca-racteriacutesticas muy diversas destaca los beneficios de esta teacutecnica para la restauracioacuten de taludes de infraestructuras lineales (Albaladejo et al 2000 Holmes 2001 Bowen et al 2005) Por ejemplo Tor-mo et al (2007) obtienen en taludes de la N-330 en Utiel (Valencia) que al menos durante los dos primeros antildeos las coberturas vegetales en terra-plenes en los que se ha aportado tierra vegetal son superiores que en terraplenes-control sin tierra vegetal (Figura 17) Las parcelas no tratadas tarda-ron tres antildeos en alcanzar valores medios de cober-tura vegetal equivalentes a los que se registraron el primer antildeo en las parcelas con tierra vegetal No obstante en esta regioacuten con condiciones climaacuteticas severas las coberturas vegetales alcanzadas en el primer antildeo tras la aplicacioacuten de la tierra vegetal (35) son insuficientes para poder garantizar un

No obstante el eacutexito de la aplicacioacuten de la tierra ve-getal puede ser muy variable dependiendo de su ma-nejo durante las operaciones de decapado acopio y extendido del suelo (Balaguer 2002) Mola et al (2011) demuestran que el aporte de semillas a los taludes mediante el banco natural de semillas conte-nido en la tierra vegetal es escaso con las praacutecticas actuales de manejo de la tierra vegetal y sugieren que la influencia positiva de la tierra vegetal en la revegetacioacuten de los taludes se debe en gran medida a la mejora de las condiciones abioacuteticas del sustrato

No obstante los estudios sobre la estructura y di-naacutemica de bancos de semillas en otros ambientes

proporcionan informaciones uacutetiles para un manejo maacutes adecuado de la tierra vegetal en los ambientes de taludes de carretera con repercusiones benefi-ciosas sobre el rendimiento del banco de semillas Por ejemplo Traba et al (2006) constatan en distin-tos ecosistemas de ambientes aacutecidos mediterraacuteneos que la mayoriacutea de las semillas viables se encuentran en los primeros 5 cm de profundidad del suelo (Fi-gura 19) Otros estudios realizados en ecosistemas deseacuterticos o en canteras de mineriacutea apoyan estas observaciones puntualizando que el 80-90 de las semillas viables se encuentran en la capa maacutes super-ficial del suelo es decir en los primeros 2 cm (Tacey y Glossop 1980 Kemp 1989)

existentes la adicioacuten de tierra vegetal presenta la ventaja antildeadida de ser capaz de contrarrestar al mismo tiempo el filtro de la dispersioacuten En efecto la tierra vegetal cumple la doble funcioacuten de a) mitigar las malas condiciones abioacuteticas del sue-lo por su mayor contenido en materia orgaacutenica y microorganismos y b) aportar semillas al talud mediante el banco natural de semillas contenido en el suelo

Figura 17 Influencia de la aplicacioacuten de tierra vegetal en la densidad de vegetacioacuten (media plusmn error tiacutepico) alcanzada a lo largo de 4 antildeos en parcelas experimentales en terraplenes de la carretera N-330 (Utiel Comunidad Valenciana) Los taludes se acabaron de construir en septiem-bre de 2003 P le 005 P le 001 ns diferencia no significativa estadiacutesticamente Modificado a partir de Tormo et al 2009

control eficiente de la erosioacuten en caso de lluvias intensas (Gyssels et al 2005 Bochet et al 2010a) En estas condiciones es aconsejable optar por un tratamiento que combina el aporte de tierra vegetal y la hidrosiembra de semillas de especies cuidado-samente seleccionadas para garantizar el eacutexito de la restauracioacuten (Bochet et al 2010a veacutease aparta-do IV3) Valladares et al (2004) tambieacuten ponen de manifiesto la eficacia de la tierra vegetal al menos durante los tres primeros antildeos en desmontes hi-drosembrados de baja pendiente (26deg) de la au-topista Andash7 (Maacutelaga) (Figura 18) Por otro lado el beneficio a largo plazo del aporte de tierra vege-tal ha sido evidenciado por Wali (1999) al obser-var 45 antildeos despueacutes del tratamiento un grado de evolucioacuten de la vegetacioacuten varias deacutecadas maacutes avanzado en taludes de mineriacutea tratados con tie-rra vegetal que en aquellos no tratados

Figura 18 El efecto de la adicioacuten de tierra vegetal en la cubierta vegetal en un desmonte hidrosembrado de la Autopista de la Costa del Sol (Maacutelaga) fue muy patente desde un principio asiacute como tres antildeos despueacutes del tratamiento La cobertura en las zonas con tierra vegetal fue muy superior a la de las zonas sin tierra vegetal durante todo el periodo de seguimiento (gt3 antildeos) Extraiacutedo de Valladares et al 2004

Hidrosiembra en desmonte lsaquo26deg

Superficie con y sin tierra vegetal

Autopista de la Costa del Sol

(Estepona Maacutelaga 2001-2002)

Vegetacioacuten en desmonte

Con tierra cobertura 100

Sin tierra cobertura 403 antildeos

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IacuteNDICE

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Primavera 96 Otontildeo 96 Primavera 97

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Primavera 96 Otontildeo 96 Primavera 97

A

Nordm

sem

illas

1800

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1000

800

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400

200

0

Figura 19 Nuacutemero de semillas por sonda (16 cm2) en distintos ecosistemas de ambientes aacutecidos mediterraacuteneos (verde pastizales pastoreados azul matorrales sin pastoreo) Datos correspondientes a una superficie de muestreo de 320 cm2 (20 sondas de 16 cm2 en cada parcela) y una profundidad de suelo de 0-5 cm (graacutefica A) y de 5-10 cm (graacutefica B) Noacutetense las diferentes escalas de cada graacutefica Datos de Traba et al 2006

Por otro lado se ha constatado en ambientes medi-terraacuteneos que la cantidad de semillas viables en el banco del suelo presenta un ciclo anual con un maacutexi-mo durante el verano antes de que las primeras lluvias de otontildeo hayan provocado la germinacioacuten de la mayor parte de las anuales y un miacutenimo al prin-cipio de la primavera antes de que hayan producido semillas las especies vernales (Ortega et al 1997) Esta fluctuacioacuten es tanto mayor cuanto mayor es el grado de perturbacioacuten del sistema Asiacute por ejemplo

Figura 20 Media del nuacutemero de semillas viables en otontildeo y primavera en los 10 cm superficiales de suelo Las muestras fueron recogidas en parcelas pastoreadas de zonas altas y bajas de ladera a lo largo de un gradiente altitudinal en la Sierra de Guadarrama (Madrid) Extraiacutedo de Ortega et al 1997

Asimismo diversos estudios indican que el espesor del suelo influye en la germinacioacuten de las semillas con una profundidad oacuteptima igual o inferior a 2 cm (Andrade et al 1997 Torma y Hodi 2000 Traba et al 2004) Estos estudios demuestran que espesores de suelo excesivos superiores a 10 cm pueden incluso inhibir la germinacioacuten de las semillas o la emergen-cia de los brotes

En resumen estos datos indican que para conse-guir un rendimiento oacuteptimo del banco de semillas en la tierra vegetal se debe realizar un decapado superficial del terreno a desbrozar (de los primeros 5 cm en lugar de los 20-25 cm que recomiendan los proyectos) al final del verano y antes de las primeras lluvias y se debe aplicar una capa muy poco profunda de tierra vegetal (5 cm en lugar de los 30-35 cm que recomiendan los proyectos) No obstante se necesita una maquinaria apropiada para garantizar un decapado superficial del suelo

3 Seleccioacuten de especies adaptadas a las condiciones de la zona a restaurar

Para mitigar los efectos de una restringida disponibi-lidad de semillas y favorecer el proceso de sucesioacuten en los taludes se recurre muy frecuentemente a la adicioacuten antroacutepica de semillas mediante hidrosiembra (veacutease Capiacutetulo 74) Desafortunadamente las espe-cies seleccionadas para las hidrosiembras se limitan habitualmente a un reducido nuacutemero de especies disponibles en el mercado (especies comerciales) y que se recomiendan indiscriminadamente para cualquier escenario geograacutefico edaacutefico o climaacutetico (Balaguer 2002) Sin embargo el eacutexito de las hidro-siembras reside en gran medida en una seleccioacuten apropiada de las especies a sembrar Estas tienen que ser capaces de superar los filtros ecoloacutegicos que controlan su establecimiento en el talud Una vez superado el filtro de la dispersioacuten gracias a la hidro-siembra la incapacidad de muchas de las especies

cuando se comparan pastizales a lo largo de un gra-diente altitudinal de 500 a 1800 m en la vertiente sur de la sierra de Guadarrama se encuentra que los pastos dominados por anuales presentan una alta fluctuacioacuten intraanual que va desde 1300 semillas viables16 cm2 en otontildeo a 250 semillas a principios de primavera mientras que los pastos suprafores-tales presentan una fluctuacioacuten desde 300 semillas viables16 cm2 a 200 en las mismas eacutepocas del antildeo respectivamente (Figura 20)

Nordm

sem

illas

00

01 m

2

642 891 1215 1449 1719

Zona alta

Zona baja

Otontildeo

Primavera

Altitud (m)

15000

10000

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IacuteNDICE

incluidas en las mezclas de semillas comerciales de superar el filtro abioacutetico es una de las causas maacutes frecuentes de fracaso Como alternativa se ha propuesto el uso de especies locales (del pool lo-cal externo Figura 1) tras comprobarse en distintos ambientes mediante siembras experimentales que se establecen mejor que las especies comerciales usadas en mezclas estaacutendares (Paschke et al 2000 Prach 2003 Tinsley et al 2006) Desde el punto de vista de la restauracioacuten del capital natural en forma de bienes y servicios el uso de especies locales es altamente recomendable por sus ventajas ecoloacutegicas y geomorfoloacutegicas tales como la preservacioacuten de la integridad geneacutetica la conservacioacuten de la diversidad local la compatibilidad con otras especies locales y el control eficiente de la erosioacuten (Petersen et al 2004 Tinsley et al 2006 Steinfeld et al 2007)

No obstante la teoriacutea sobre los filtros ecoloacutegicos nos advierte que el uso de especies lsquolocalesrsquo (del pool lo-cal externo Figura 1) no siempre garantiza el eacutexito de la revegetacioacuten El experimento de Tormo et al (2006) corrobora esta idea dado que varias de las especies sembradas del pool local no fueron capaces de esta-blecerse en las condiciones limitantes de los taludes (Figura 4) Por ello Bochet et al (2010b) proponen una metodologiacutea de seleccioacuten de especies basada en la idea de que aquellas especies capaces de co-lonizar espontaacuteneamente y de forma abundante los taludes son especies idoacuteneas que estaacuten adaptadas

a las condiciones locales de estos y que presentan por tanto ciertas garantiacuteas de eacutexito para la revege-tacioacuten de estas laderas El proceso de seleccioacuten se divide en dos fases En primer lugar la identificacioacuten mediante inventarios floriacutesticos de las especies que colonizan con eacutexito los taludes y en segundo lugar la validacioacuten del proceso de seleccioacuten mediante siem-bras experimentales a pequentildea escala con las espe-cies identificadas Esta segunda fase es importante tambieacuten para descartar problemas de competencia entre especies seleccionadas para las mezclas (Ma-tesanz y Valladares 2007) Aplicando este meacutetodo a taludes de la comarca de Requena-Utiel Bochet et al (2010b) identificaron entre las especies del pool local externo 41 especies capaces de colonizar espontaacute-neamente y con eacutexito al menos uno de los cuatro tipos de taludes estudiados (terrapleacuten norte terra-pleacuten sur desmonte norte desmonte sur Tabla 3) En la fase de validacioacuten se demostroacute mediante una hidrosiembra en unos terraplenes de la N-330 (Utiel Valencia) un mayor establecimiento de la vegetacioacuten con la mezcla de semillas de especies seleccionadas a partir de esa lista de 41 especies (lsquocolonizadoras con eacutexitorsquo) en comparacioacuten con una mezcla de semillas de especies comerciales utilizada habitualmente en esta regioacuten para la revegetacioacuten de taludes (NTJ 08H 1996) Las densidades de cobertura vegetal fueron de 4 a 15 veces mayores durante al menos los cuatro primeros antildeos para la mezcla de especies locales se-leccionadas con este meacutetodo (Figura 21)

Figura 21 Cobertura vegetal (media plusmn desviacioacuten estaacutendar) proporcionada por las especies sembradas incluidas en la mezcla de especies seleccionadas (SelMix especies colonizadoras espontaacuteneas con eacutexito) y en la mezcla estaacutendar de especies comerciales (ComMix) durante los cuatro primeros antildeos tras una hidrosiembra a pequentildea escala La hidrosiembra se realizoacute en septiembre de 2003 Modificado a partir de Bochet et al 2010b

Evidentemente este meacutetodo garantiza el eacutexito de las especies seleccionadas uacutenicamente para unas condiciones ecoloacutegicas y un tipo de haacutebitat similares a los de las zonas inventariadas No obstante dado que las especies son capaces de superar los filtros gracias a sus caracteriacutesticas funcionales (veacutease apar-tado III4) la identificacioacuten de los rasgos funciona-les asociados al eacutexito de las especies colonizadoras de taludes podriacutea ser uacutetil para la elaboracioacuten de unos criterios teacutecnicos eficaces de seleccioacuten de es-pecies en un amplio rango de condiciones ambien-tales (Cano y Montalvo 2003 Karim y Malik 2008) Por ejemplo Cano y Montalvo (2003) proponen una tipificacioacuten integrada de las plantas de las comu-nidades de desmontes de sustratos graniacuteticos de la provincia de Pontevedra incluyendo una evalua-cioacuten de las aptitudes de los tipos encontrados para el control de la erosioacuten Los resultados de la eva-luacioacuten muestran siete tipos distintos de plantas que se discriminan por sus atributos relacionados con la adecuacioacuten ambiental la proteccioacuten aeacuterea la proteccioacuten subterraacutenea la persistencia y el valor esteacutetico Mediante este sistema de clasificacioacuten se constata que el 96 de las especies colonizadoras de desmontes son poco exigentes en cuanto a nu-trientes y presentan buenas aptitudes protectoras frente a la erosioacuten (alta proteccioacuten superficial y cre-cimiento horizontal raacutepido) Sin embargo el 48 de las especies recomendadas para la restauracioacuten de estos ambientes tienen un valor protector global de bajo a muy bajo bien por no estar adaptadas a las condiciones generales de los taludes bien por no proveer suficiente proteccioacuten superficial Estos resultados y el bajo porcentaje de especies comunes (13) entre las especies colonizadoras espontaacuteneas y las recomendadas sugieren un deficiente conoci-miento de las especies adaptadas una limitada dis-ponibilidad comercial y la existencia de criterios de seleccioacuten inadecuados

4 Utilizacioacuten de las interacciones planta-planta para la restauracioacuten

La utilizacioacuten de las interacciones positivas entre plantas en restauracioacuten tiene potencial para mejorar el eacutexito de los proyectos de restauracioacuten reducien-do a su vez el gasto en mantenimiento de estos

lugares (Padilla y Pugnaire 2006) Maacutes concretamen-te las especies herbaacuteceas promovidas al principio de la restauracioacuten por su raacutepido crecimiento y su potencial para evitar la erosioacuten podriacutean facilitar el establecimiento de especies lentildeosas (Maestre et al 2001) o incluso de otras especies herbaacuteceas dando lugar a incrementos en la diversidad y cobertura de las comunidades del talud Sin embargo el uso de estas especies herbaacuteceas como plantas facilita-doras ya sea de herbaacuteceas o lentildeosas permanece pobremente estudiado en estos medios Las inte-racciones herbaacutecea-herbaacutecea en estos medios son completamente desconocidas y los escasos estu-dios sobre las interacciones herbaacutecea-lentildeosa apun-tan a que la competencia es maacutes importante que la facilitacioacuten en estos medios (Soliveres et al en revisioacuten veacutease Capiacutetulo 67)

5 Clave dicotoacutemica para la toma de decisiones

En la Figura 22 proponemos una herramienta uacutetil en forma de clave dicotoacutemica para ayudar en la toma de decisiones para la restauracioacuten de taludes de ca-rretera Esta clave se basa en una primera propuesta de Matesanz et al (2006) parcialmente completada a partir de varios trabajos presentados en este capiacute-tulo En la clave se identifican cinco criterios princi-pales para la toma de decisiones (el clima el suelo el tipo y la pendiente del talud y la proximidad de zonas de vegetacioacuten natural)

La Figura 22 pone de manifiesto que uno de los mayores retos para el futuro reside ahora en la res-tauracioacuten de los desmontes con pendientes eleva-das (gt27deg y sobre todo gt45deg) en los que la ejecu-cioacuten del extendido de tierra vegetal representa una maniobra arriesgada y peligrosa y la aplicacioacuten de hidrosiembras no tiene eacutexito El eacutexito de la restau-racioacuten de estas laderas pasa por realizar cambios en la macrotopografiacutea reduciendo la inclinacioacuten la morfologiacutea y la longitud de las pendientes o en la microtopografiacutea aumentando la rugosidad del suelo y creando zonas de menor compactacioacuten antes de poder aplicar cualquier medida complementaria de restauracioacuten que facilite el establecimiento de la ve-getacioacuten (veacutease Capiacutetulo 3)

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Condiciones climaacuteticas

Favorables1 Desfavorables1

Tipo de talud Tipo de talud

Terrapleacuten Desmonte Terrapleacuten Desmonte

Suelo Dist Pend Suelo Dist Pend Suelo Dist

rico2 pobre2 lt27ordm cerca3 lejos3 rico2 pobre2 lt27ordm cerca3 lejos3 gt27ordm gt27ordm lt27ordm

Tierra vegetal + (hidrosiembra)4

(a partir de Valladares et al 2004)

Restauracioacuten pasiva

(a partir de Matesanz et al 2006)

simultaacuteneo simultaacuteneo

Tierra vegetal + hidrosiembra con una seleccioacuten apropiada de especies

(a partir de Bochet et al 2010)

simultaacuteneo

Pend

gt27ordm

DistSueloPend

lejos3 cerca3 pobre2rico2 gt27ordmlt27ordm lejos3cerca3 pobre2 rico2

Cambios topografiacutea yo ecotecnologiacuteas

(veacuteanse Capiacutetulos 2 y 6)

Figura 22 Clave dicotoacutemica para la toma de decisiones en la restauracioacuten de taludes de carretera Los criterios a tener en cuenta aparecen en los recuadros verdes condiciones climaacuteticas tipo de talud aacutengulo de la pendiente (Pend) condiciones del suelo (Suelo) y distancia a la vegetacioacuten natural circundante (Dist) Las liacuteneas punteadas derivan de extrapolaciones indirectas

1 Umbral de condiciones climaacuteticas lsquofavorablesdesfavorablesrsquo las condiciones climaacuteticas son desfavorables a partir del momento en que existe un periodo largo en el que el crecimiento vegetativo no es posible o estaacute fuertemente limitado por la sequiacutea Este punto criacutetico se da cuando hay maacutes de tres meses seguidos de sequiacutea o cuando la precipitacioacuten media anual es inferior o igual a 350 mm (en la Peniacutensula Ibeacuterica condiciones de ombroclima semiaacuterido o aacuterido seguacuten Rivas Martiacutenez 1983)

2 Umbral de suelo lsquoricopobrersquo un suelo es considerado pobre a partir del momento en que los 10 cm de tierra del talud que quedan ex-puestos a soportar la colonizacioacuten vegetal estaacuten compuestos de tierra mineral que nunca ha estado expuesta a meteorizacioacuten previamente (material litoloacutegico puro o tierra proveniente de horizontes de suelo no superficiales) o si existe una limitacioacuten edaacutefica especial (salinidad contaminacioacuten etc)

3 Umbral de distancia del talud a la flora natural lsquocercanalejanarsquo la vegetacioacuten natural se considera cercana en un intervalo de entre 0 m y miacutenimo 150 m desde el talud Estos resultados se basan en el trabajo de Bochet et al (2007a) en el que los autores no encuentran una limi-tacioacuten importante a la colonizacioacuten por falta de propaacutegalos en un intervalo 0 a 150 m desde el talud aunque siacute encuentran una segregacioacuten de las especies de acuerdo con su mecanismo de dispersioacuten vieacutendose favorecidas aquellas especies que se dispersan a larga distancia

4 Valladares et al (2004) consiguen buenos resultados con este tratamiento combinado de tierra vegetal + hidrosiembra No obstante podriacutea ser que el uacutenico tratamiento de extendido de tierra vegetal fuese suficiente (y la hidrosiembra innecesaria) para alcanzar resultados similares

V CONCLUSIONES

En este capiacutetulo se ha puesto de manifiesto la importancia del conocimiento de los principios y teoriacuteas que rigen el desarrollo de las comunidades de ecosistemas degradados en el eacutexito de su res-tauracioacuten

A partir de distintos estudios basados en el meacutetodo cientiacutefico en primer lugar se han identificado los filtros ecoloacutegicos que controlan la colonizacioacuten y la sucesioacuten en los taludes de infraestructuras lineales y en segundo lugar se han propuesto medidas de restauracioacuten eficaces basadas en la manipulacioacuten de estos filtros para distintos escenarios climaacuteticos topograacuteficos edaacuteficos y paisajiacutesticos

Antes de tomar cualquier decisioacuten en un proyecto de restauracioacuten y siempre que sea posible con-viene llevar a cabo un estudio de las variables ambientales que condicionan la zona a restaurar (clima suelo topografiacutea flora proximidad de la vegetacioacuten naturalhellip) Esta prospeccioacuten permitiraacute orientar la eleccioacuten de las medidas maacutes adecuadas y garantizar su viabilidad y rentabilidad en teacutermi-nos de coste beneficio

No obstante no siempre es necesario intervenir ya que en ocasiones la colonizacioacuten natural es suficien-te para proporcionar una cobertura vegetal eficaz en el control de la erosioacuten y la estabilizacioacuten del suelo

Ademaacutes cualquier actuacioacuten que favorezca los pro-cesos espontaacuteneos de colonizacioacuten regeneracioacuten y sucesioacuten daraacute lugar a ecosistemas maacutes sostenibles a largo plazo

Las teacutecnicas convencionales de extendido de tierra vegetal yo hidrosiembra pueden proporcionar resul-tados satisfactorios siempre y cuando se optimice su rendimiento con un manejo apropiado de la tierra vegetal yo con una seleccioacuten adecuada de las espe-cies hidrosembradas

La revegetacioacuten de los desmontes de elevada pen-diente sigue representando un reto importante para el futuro Tambieacuten se hace necesario un mayor cono-cimiento sobre la evolucioacuten de las comunidades de taludes a medio y largo plazo

Finalmente los estudios enfocados a la restauracioacuten de taludes de carretera cobraraacuten realmente sentido cuando esteacuten al alcance de los gestores con el fin de ser aplicados en restauracioacuten de los taludes de infraestructuras lineales

VI PREGUNTAS CLAVE

iquestEsimportanteconocerlosprocesosecoloacutegicosquedeterminanelensamblajedelasespeciesencomunidadesparalarestauracioacutendelostaludesdeinfraestructuraslineales

Siacute Los procesos ecoloacutegicos que determinan el en-samblaje de las especies pueden verse limitados en los taludes por una serie de factores (abioacuteticos bioacuteticos o de disponibilidad de semillas) tambieacuten llamados lsquofiltros ecoloacutegicosrsquo La identificacioacuten de los filtros maacutes limitantes al establecimiento de las plan-tas en estos ambientes es sumamente importante como paso previo a la toma de decisiones para el eacutexito de su restauracioacuten Asimismo la restauracioacuten consiste en la manipulacioacuten conscientemente del o de los filtros maacutes limitantes con el objetivo de acelerar o dirigir el proceso de colonizacioacuten vegetal

iquestLacolonizacioacutenespontaacuteneadelostaludesdeinfraestructuraslinealesporalgunasespecies(ynoporotras)sedebealazar

No La colonizacioacuten de los taludes responde a un proceso de seleccioacuten de las especies locales (de la zona) a traveacutes de los distintos filtros ecoloacutegicos La seleccioacuten de las especies se hace en funcioacuten de sus caracteriacutesticas que reflejan su capacidad para lle-gar germinar establecerse y competir en el talud

iquestCuaacuteleselfactormaacuteslimitanteparaelestablecimientodelasplantasenlostaludesdeinfraestructuraslineales

Las malas condiciones geomorfoloacutegicas edaacuteficas y bioloacutegicas que caracterizan habitualmente a los ta-ludes al teacutermino de la obra suelen ser limitantes en las primeras etapas de la colonizacioacuten de los taludes (germinacioacuten de las semillas y supervivencia de las

plaacutentulas) sobre todo en desmontes y en climas se-cos En las etapas posteriores de la sucesioacuten el filtro bioacutetico (competencia) puede cobrar una mayor impor-tancia al menos en terraplenes y climas huacutemedos

iquestCuaacutendoactuar(restauracioacutenpasivaoactiva)

Las malas condiciones abioacuteticas de los taludes al teacutermino de la obra comprometen en gran medida el eacutexito de una colonizacioacuten raacutepida de estas laderas y por tanto tambieacuten de una restauracioacuten pasiva Solo en condiciones climatoloacutegicas topograacuteficas geoloacute-gicas y edafoloacutegicas muy favorables se podraacute optar por una restauracioacuten pasiva Estas circunstancias se dan en presencia de precipitaciones y temperaturas adecuadas y de laderas de pendiente suave sin aflo-ramientos rocosos y suelos sin carencias nutritivas o problemas fiacutesicos importantes (nutrientes com-pactacioacuten) y proacuteximas a zonas de vegetacioacuten natural (veacutease Figura 22) Sin embargo cuando al menos uno de estos factores sea menos favorable para el establecimiento de la vegetacioacuten se optaraacute por una restauracioacuten activa con una cuidadosa eleccioacuten de las teacutecnicas de restauracioacuten maacutes adecuadas en fun-cioacuten de los filtros maacutes limitantes en cada situacioacuten

iquestCoacutemoactuar

Las medidas de restauracioacuten que se toman deben de estar dirigidas a contrarrestar el efecto del o de los filtros maacutes limitantes al establecimiento de las plantas en cada circunstancia Por ejemplo una es-casa disponibilidad de semillas debida a la ausencia de vegetacioacuten natural en las proximidades de los taludes puede ser suplida bien por la aplicacioacuten de una capa de tierra vegetal en buenas condiciones que incluye el banco de semillas de las especies locales bien por la hidrosiembra de semillas de

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especies elegidas por su capacidad de adaptacioacuten a las condiciones del medio La aplicacioacuten de tierra vegetal tambieacuten permite contrarrestar las limitacio-nes derivadas de unas malas condiciones edaacuteficas del suelo

iquestCoacutemooptimizarelcontenidodesemillasenlatierravegetal

En el trazado de la obra extraer la capa superficial con una profundidad maacutexima de 10 cm ya que por debajo de esta profundidad el nuacutemero de semillas viables es miacutenimo Esto supone el uso de una ma-quinaria apropiada para garantizar una extraccioacuten

superficial del suelo En la medida de lo posible co-ger la tierra vegetal al final del otontildeo cuando el con-tenido en semillas viables es maacuteximo Tratar de no almacenar la tierra vegetal incorporaacutendola a taludes recieacuten construidos en zonas proacuteximas a la extraccioacuten para maximizar la presencia de ecotipos adaptados a las condiciones climaacuteticas y edaacuteficas locales En caso de que la tierra vegetal sea almacenada hacerlo en montones pequentildeos y poco compactados y si las semillas han germinado esperar a que las plantas produzcan nuevas semillas que se incorporen al sue-lo Extender la tierra vegetal en capas finas (menos de 5 cm) ya que semillas de herbaacuteceas enterradas a maacutes profundidad no seraacuten capaces de emerger

Usodeunasmismasteacutecnicasderestauracioacutenparacualquierescenariogeograacuteficoclimaacuteticooedaacutefico

El uso habitual de rsquorecetasrsquo generales para la res-tauracioacuten de los taludes de infraestructuras lineales se ha traducido en la utilizacioacuten de unas mismas teacutecnicas de restauracioacuten para cualquier escenario geograacutefico climaacutetico o edaacutefico Esto conduce a la aplicacioacuten de teacutecnicas muy caras (pe hidrosiem-bras o esparcido de tierra vegetal) de las que se

podriacutea prescindir en muchas ocasiones bien por-que las condiciones climaacuteticas y edaacuteficas permiten una colonizacioacuten espontaacutenea raacutepida a partir de la vegetacioacuten natural circundante bien porque estaacuten condenadas al fracaso en condiciones extremas como es el caso en los desmontes de elevada pen-diente Por tanto para rentabilizar al maacuteximo la in-versioacuten econoacutemica de los proyectos se debe selec-cionar concienzudamente la o las teacutecnicas de res-tauracioacuten maacutes apropiadas para cada circunstancia

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VII ERRORES HABITUALES

Usodeespecieslsquoautoacutectonasrsquoenlashidrosiembrasindependientementedesucapacidaddeadaptacioacutenalascondicionesdelostaludes

Desde hace unos antildeos se recomienda incluir una proporcioacuten determinada de semillas de especies lsquoautoacutectonasrsquo en las mezclas usadas en las hidro-siembras de taludes de carretera Aunque son especies vinculadas a la zona puesto que per-tenecen al pool externo de especies locales no suelen ser especies adaptadas a las condiciones abioacuteticas de los taludes al menos en las prime-ras fases de la sucesioacuten Suelen ser especies maacutes propias de situaciones estables que aparecen en estadios maacutes avanzados de la sucesioacuten vegetal En este sentido el teacutermino de lsquoespecies autoacutec-tonasrsquo usado extensamente en el contexto de la restauracioacuten de taludes de carretera deberiacutea hacer referencia a aquellas especies autoacutectonas pero asociadas a entornos y condiciones ecoloacutegicas si-milares al de los taludes y no a las formaciones forestales o de maacuteximo nivel de desarrollo carac-teriacutesticas de la regioacuten (veacutease seccioacuten IV3)

Usodeunasmismasmezclasdesemillasenlashidrosiembrasdetaludesdedistintotipoyorientacioacuten

Dado que la intensidad de los factores que limitan el establecimiento de las plantas en los taludes variacutea en funcioacuten del tipo y orientacioacuten de los talu-des (erosioacuten competencia compactacioacuten dispo-nibilidad de aguahellip) y que los filtros seleccionan a las especies en funcioacuten de sus rasgos las mezclas de semillas para las hidrosiembras deberiacutean de

disentildearse tomando en consideracioacuten estas dife-rencias No obstante esta propuesta encarece los costes de la restauracioacuten al mismo tiempo que ralentiza su ejecucioacuten Una solucioacuten alternativa consistiriacutea en elaborar mezclas de semillas que in-cluyan especies capaces de establecerse con eacutexito en todos los tipos y orientaciones de taludes de una misma zona (veacutease el ejemplo de especies en la Tabla 3 para la zona de la Autoviacutea Andash3 a la altura de la Plana de Utiel-Requena en la Comu-nidad Valenciana)

Exclusioacutendelavegetacioacutennaturalcircundanteenelproyectopreviodeconstruccioacutenyenlafasederestauracioacuten

En la mayoriacutea de las ocasiones la existencia de vegetacioacuten natural en los aledantildeos de la obra suele obviarse desde las fases iniciales de construccioacuten de la infraestructura ya que estas zonas no se con-sideran parte de la obra Si a esto le sumamos las dificultades econoacutemicas que conlleva la inclusioacuten de maacutes terreno en el proyecto la realidad es que pocas veces se aprovecha la presencia de manchas de vegetacioacuten natural como agente de restauracioacuten pasivo e incluso se desbrozan para disminuir la probabilidad de incendios ocasionados por el traacute-fico En este capiacutetulo se ha destacado los bene-ficios de determinados tipos de haacutebitat y de su proximidad al talud como fuente de semillas para la colonizacioacuten de los taludes La evaluacioacuten previa de estos indicadores (tipo de haacutebitat y distancia al talud) permitiraacute determinar si interesa incluir las zonas de vegetacioacuten natural cercanas en el proyec-to de restauracioacuten del talud

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Introduccioacuten de especies lentildeosas

Pedro Villar-Salvador Santiago Soliveres y Joseacute Luis Quero

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IacuteNDICE

CAPIacuteTULO 6 Introduccioacuten de especies lentildeosas

Pedro Villar-Salvador Santiago Soliveres y Joseacute Luis Quero

I OBJETIVOS DE LA REVEGETACIOacuteN CON PLANTAS LENtildeOSAS FACTORES LIMITANTES

Las infraestructuras lineales (autopistas carrete-ras caminos viacuteas del tren etc) generan numero-sos impactos ambientales durante su construccioacuten y explotacioacuten (Forman y Alexander 1998 Steinfeld et al 2007) (veacutease Capiacutetulo 1) Por ello uno de los objetivos de las obras de las infraestructuras linea-les debe ser su integracioacuten ambiental y funcional en el territorio que atraviesan La vegetacioacuten tanto la surgida espontaacuteneamente como la introducida acti-vamente desempentildea un papel muy importante en dicho objetivo No obstante la revegetacioacuten activa tambieacuten es importante para conseguir otros objeti-vos relacionados tanto con el mantenimiento de la integridad de la infraestructura como con la seguri-dad y comodidad de sus usuarios Especiacuteficamente los principales objetivos que se persiguen con la revegetacioacuten son (Forman et al 2003)

a Integrar la infraestructura en la dinaacutemica ecoloacutegi-ca del territorio circundante mediante la restaura-cioacuten o rehabilitacioacuten de funciones ecosisteacutemicas como la creacioacuten mejora y proteccioacuten del suelo reduccioacuten de la escorrentiacutea superficial mitigacioacuten de la fragmentacioacuten de las poblaciones de orga-nismos y catalizacioacuten de la sucesioacuten secundaria asiacute como la mejora de la calidad del agua emitida por la infraestructura

b Mantener la integridad de la infraestructura y pro-porcionar una barrera de colisioacuten eficaz y segura en caso de accidentes

c Minimizar el deslumbramiento de los conducto-res apantallar el ruido y los gases contaminantes y reducir el viento lateral

d Eliminar los impactos visuales de las obras y me-jorar la percepcioacuten esteacutetica de la infraestructura

La implantacioacuten de una comunidad de plantas herbaacute-ceas es muy eficaz para algunas de estas funciones como prevenir la erosioacuten (Andreacutes y Jorba 2000) pero no para otras Por ello las plantas lentildeosas deben ser un complemento a las hierbas en los proyectos de revegetacioacuten de infraestructuras lineales Sin em-bargo en ambientes muy secos o cuando los suelos son muy pobres en nutrientes el establecimiento de una cubierta de hierbas es difiacutecil y lento Ello es debido a que las hierbas en general y particularmen-te las que se utilizan en la restauracioacuten de infraes-tructuras lineales demandan una gran cantidad de recursos y son poco tolerantes a factores de estreacutes Ademaacutes en ambientes mediterraacuteneos la hierba se marchita al final de la primavera incrementaacutendose el riesgo de incendio por lo que se hace necesario segarla con el consiguiente incremento del coste de mantenimiento de la obra En estos casos las plantas lentildeosas no tendriacutean por queacute ser solamente un complemento a las plantas herbaacuteceas sino una alternativa La introduccioacuten de plantas lentildeosas per-mite no solamente acelerar la sucesioacuten secundaria garantizando a medio y largo plazo todas las funcio-nes de proteccioacuten frente a la erosioacuten estabilizacioacuten del suelo y drenaje de agua La ventaja de las espe-cies lentildeosas frente a las herbaacuteceas es que producen un sistema radicular mucho maacutes profundo extenso y resistente favoreciendo una mayor consolidacioacuten y estabilidad del suelo si la densidad de planta es

suficientemente elevada Ademaacutes a largo plazo re-duciraacuten el riesgo de incendio porque la mayoriacutea de ellas permanecen verdes durante el verano y permi-ten crear manchas discontinuas de vegetacioacuten embe-bidas en una matriz de suelo desnudo lo que redu-ce la propagacioacuten del fuego en caso de incendio No conviene implantar formaciones mono especiacuteficas ya que ecoloacutegicamente pueden ser menos funciona-les resistentes y resilientes frente a perturbaciones y factores de estreacutes Tampoco es recomendable la eliminacioacuten total de la vegetacioacuten herbaacutecea antes o durante la introduccioacuten de plantas lentildeosas porque seraacute fundamental para prevenir la erosioacuten hasta que se consiga una cobertura adecuada de especies le-ntildeosas que pueda cumplir con dicha funcioacuten A la lar-ga las especies lentildeosas seraacuten las que excluyan a las hierbas A pesar de su importancia y la experiencia proveniente de la restauracioacuten forestal las plantas lentildeosas no reciben la atencioacuten debida en los pro-yectos de restauracioacuten de infraestructuras lineales ni se dedican los recursos suficientes para su man-tenimiento El resultado son taludes con herbazales sempiternos con coberturas de lentildeosas muy pobres en los que se gastan importantes recursos en siegas y herbicidas para prevenir incendios

El objetivo de este capiacutetulo es abordar los princi-pales factores limitantes y las praacutecticas que condi-cionan el establecimiento de las plantas lentildeosas en las obras de infraestructuras viarias Pretendemos hacer eacutenfasis en aquellos aspectos que a nuestro juicio son muy determinantes en la implantacioacuten de las plantas identificar los principales errores y dar una base cientiacutefica a la toma de las decisiones im-portantes

Las principales limitaciones para la implantacioacuten de plantas lentildeosas en infraestructuras lineales y los fac-tores que las determinan se recogen en la Tabla 1 (Steinfeld et al 2007)

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II SELECCIOacuteN DE ESPECIES E IMPORTANCIA DE LA PROCEDENCIA DE LOS MATERIALES DE REPRODUCCIOacuteN

La seleccioacuten de especies lentildeosas destinadas a obras civiles tradicionalmente se ha basado tanto en el potencial colonizador y la resistencia a condiciones

adversas de las especies como en criterios ornamen-tales en detrimento de otros aspectos maacutes impor-tantes desde el punto de vista ecoloacutegico

Tabla 1 Principales factores limitantes para el establecimiento de plantas lentildeosas en obras de infraestructuras lineales

FACTOR LIMITANTE iquestQUEacute CAUSA LA LIMITACIOacuteN

Disponibilidad de agua en el suelo

El reacutegimen de precipitaciones y temperaturas de la zona la orientacioacuten de la ladera y la posicioacuten en ella el viento la profundidad textura y compactacioacuten del suelo la vegetacioacuten preexistente

Disponibilidad de suelo y su estabilidad superficial

La intensidad de la precipitacioacuten la pendiente y longitud de la ladera las heladas la vegetacioacuten preexistente la pedregosidad superficial la falta de tierra vegetal

Fertilidad del suelo y baja actividad de los organismos del suelo

El contenido de materia orgaacutenica textura pH y salinidad del suelo la vegetacioacuten preexistente el tipo de roca madre la posicioacuten en la ladera y la abundancia de organismos edaacuteficos

Bajas temperaturas La altitud latitud y la orientacioacuten de la ladera

Depredacioacuten Altas densidades de herbiacutevoros

Ausencia de propaacutegulos de plantas

Fuentes de propaacutegulos alejados de la infraestructura lineal (Tormo et al 2009) y la llegada de organismos dispersores a la infraestructura lineal No obstante en ciertas infraestructuras lineales fomentar la llegada de ciertos dispersores como las aves puede poner en peligro la seguridad vial y la de las aves

Competencia con plantas especialmente de hierbas

La disponibilidad de agua y nutrientes minerales en el suelo

Los principales criterios que se deben tener en cuen-ta para la seleccioacuten de especies lentildeosas para infraes-tructuras lineales son

a Las especies deben estar adaptadas a las con-diciones ambientales del sitio de revegetacioacuten Ello significa que deben sobrevivir crecer y ser capaces de regenerar sus poblaciones sin ayuda o con una intervencioacuten miacutenima una vez estable-cidas Para ello se deben seleccionar especies na-tivas y dentro de estas emplear semillas o plan-tones de procedencias cercanas o en su defecto

compatibles con la zona a revegetar Este criterio es importante para reducir tanto los costes de es-tablecimiento y mantenimiento de la vegetacioacuten como el riesgo de expansioacuten de especies invaso-ras (Steinfeld et al 2007)

b Entre el abanico de especies posibles elegir aquellas cuyas caracteriacutesticas (pe porte den-sidad de follaje velocidad de crecimiento ca-pacidad de rebrotar produccioacuten de frutos etc) satisfagan mejor los objetivos del proyecto Por ejemplo si se necesita crear una barrera viva en

una mediana de una carretera que evite el des-lumbramiento de los conductores y detenga un vehiacuteculo que se salga de la calzada sin dantildear a sus ocupantes no se podraacuten utilizar ni aacuterboles ni especies de muy bajo porte como un tomillo (Thymus sp) o un espliego (Lavandula latifolia)

c Verificar que las semillas y plantas de las proce-dencias deseadas estaacuten disponibles en el merca-do No todas las especies estaacuten accesibles a cos-tos econoacutemicos razonables debido a la dificultad de su produccioacuten en vivero a gran escala (Vallejo et al 2003)

En relacioacuten con el primer criterio de seleccioacuten los atributos funcionales de las plantas son un aspecto fundamental para seleccionar las especies Englo-ban las caracteriacutesticas morfoloacutegicas y fisioloacutegicas que condicionan el uso del agua y el metabolismo energeacutetico y por tanto la supervivencia y creci-miento de las plantas Por ejemplo las diferencias en la arquitectura hidraacuteulica (Martiacutenez-Vilalta et al 2002) la arquitectura de la copa (Esteso-Martiacutenez et al 2006) la profundidad de las raiacuteces (Padilla y Pugnaire 2007) o las caracteriacutesticas foliares (Poor-ter y Bongers 2006) pueden determinar las diferen-cias de crecimiento y supervivencia de las especies en una contexto ambiental determinado Dentro de las caracteriacutesticas foliares el aacuterea especiacutefica foliar (SLA) que es el cociente entre el aacuterea y el peso seco de la hoja tiene una gran trascendencia fun-cional ya que se relaciona positivamente con la velocidad de crecimiento la tasa de fotosiacutentesis y transpiracioacuten de las plantas y negativamente con la resistencia a la herbivoriacutea (Ruiz Robleto y Villar 2005 Villar et al 2008 Poorter et al 2009) Va-lores bajos de SLA indican hojas maacutes densas yo gruesas Este tipo de hoja tambieacuten suele tener una mayor capacidad de retener agua y una menor ca-pacidad de transpiracioacuten lo que confiere ventajas adaptativas en climas con escasez de agua como los mediterraacuteneos (Cornelissen et al 1996 Antuacutenez et al 2001 Poorter et al 2009) Prueba de ello es que en una plantacioacuten de especies lentildeosas medite-rraacuteneas en los taludes de una carretera del Parque Natural Sierra de Cardentildea y Montoro (Coacuterdoba) se observoacute una relacioacuten negativa entre el aacuterea espe-ciacutefica foliar y la supervivencia (Figura 1) Especies con hojas de bajo SLA como Quercus ilex (enci-na) Pistacia lentiscus (lentisco) u Olea europaea var sylvestris (acebuche) estaacuten mejor adaptadas a soportar la elevada insolacioacuten y temperatura de los taludes durante el verano en contraposicioacuten con Viburnum tinus (durillo) o Quercus faginea (queji-go) que son especies predominantes en umbriacuteas y

por tanto tienen hojas maacutes finas que les permiten captar mayor radiacioacuten pero no para retener agua

En relacioacuten con la arquitectura hidraacuteulica del tallo el agua sube desde las raiacuteces hasta las hojas a traveacutes de los conductos del xilema La ascensioacuten del agua es un transporte pasivo que se realiza aprovechan-do la fuerza de cohesioacuten de las moleacuteculas de agua y es fundamental que la columna de agua que va por el interior de los conductos no se rompa De lo contrario se formariacutea una embolia (esto es aire en el conducto) que impediriacutea el flujo de agua hasta las hojas La embolia de los conductos del xilema es una de la principales causas de muerte en las espe-cies lentildeosas (McDowell et al 2008) En situaciones de sequiacutea estival la falta de agua en el suelo y la mayor transpiracioacuten foliar provocan tensiones en las columnas de agua de los conductos del xilema que pueden llegar a romperlas La mejor manera de me-dir la resistencia del xilema al embolismo es median-te las curvas de vulnerabilidad (Sperry y Saliendra 1994) en las que se determina el potencial hiacutedrico al que el tallo pierde el 50 de su conductividad hidraacuteulica (P

50) Valores muy negativos de P

50 indi-

caraacuten elevada resistencia al embolismo (Martiacutenez-Vilalta et al 2002) En la repoblacioacuten de los taludes del Parque Natural Sierra de Cardentildea y Montoro que se mencionoacute anteriormente se observoacute una relacioacuten positiva entre supervivencia y P

50 de forma que las

especies maacutes resistentes al embolismo presentaron mayor supervivencia que las especies menos resis-tentes (Figura 1)

En este estudio cabe destacar el caso particular de Retama sphaerocarpa (retama) que es una especie con relativamente poca resistencia al embolismo (P

50= -3 MPa) pero con una gran supervivencia Esto

indica que aunque la arquitectura hidraacuteulica es muy importante para el funcionamiento de las plantas no puede predecir perfectamente el potencial de su-pervivencia de una especie dado que en un mismo sistema la adaptacioacuten de las plantas puede basarse en otras estrategias en las que otros atributos fun-cionales tambieacuten pueden ser importantes (Miranda et al 2010) De ahiacute que recomendemos que la seleccioacuten de especies base en una combinacioacuten de varias ca-racteriacutesticas funcionales En el caso de la retama su alta supervivencia estaacute relacionada con la formacioacuten de profundas raiacuteces (Padilla y Pugnaire 2007) y con la falta de hojas que permite reducir la transpiracioacuten concentrando la fotosiacutentesis en los tallos los cuales ademaacutes tienen valores bajos de SLA (Figura 1)

En conclusioacuten los rasgos funcionales pueden indicar la supervivencia potencial de las especies y por ende

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es un buen criterio para su seleccioacuten en trabajos de restauracioacuten Por ejemplo el durillo con un alto SLA hojas grandes y baja resistencia al embolismo difiacute-cilmente soportaraacute las condiciones de sequiacutea y fuer-te radiacioacuten durante el verano Para la seleccioacuten de especies no es necesario cuantificar SLA o P

50 En la

literatura cientiacutefica existe cada vez maacutes informacioacuten sobre rasgos funcionales asociados a la supervivencia como los presentados aquiacute Consultando los valores por especie de estos rasgos en la literatura cientiacutefica es posible establecer el potencial de supervivencia de las especies en condiciones adversas

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0 2 4 6 8 10 12 14SLA (m2 kg-1)

Retama sphaerocarpa Quercus ilex

Quercus coccifera

Quercus faginea

Olea europea

Pistacia lentiscus

Rhamnus lycinoides

Viburnum tinus

r = -669 P lsaquo 005

Crataegus monoyna

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0

Supe

rviv

enci

a (

)

0 2 4 6 8 10

P50 (-MPa)

Retamasphaerocarpa

Quercus ilex

Quercus faginea

Olea europea

Pistacia lentiscus

Viburnum tinus

r = 070 P lsaquo 01

Quercus coccifera

Figura 1 Relacioacuten entre la supervivencia y el aacuterea especiacutefica foliar (SLA) (panel superior) y el potencial hiacutedrico en el que los tallos pierden el 50 de su conductividad hidraacuteulica (P

50) (panel inferior) entre diferentes especies lentildeosas mediterraacuteneas Los nombres comunes de las

especies son retama (Retama sphaerocarpa) encina (Quercus ilex) quejigo (Q faginea) coscoja (Q coccifera) acebuche (Olea europaea var sylvestris) lentisco (Pistacia lentiscus) taraje (Tamarix sp) y durillo (Viburnum tinus) El punto blanco correspondiente a retama no se incluyoacute en el anaacutelisis de correlacioacuten (veacutease texto para maacutes detalles)

Una vez seleccionadas las especies de plantas es importante que para cada una se elija correctamente el origen o procedencia de los materiales de repro-duccioacuten (MR) Los MR son las plantas o sus partes y las semillas que se usaraacuten en el proyecto de re-vegetacioacuten Muchas especies presentan variaciones funcionales entre poblaciones dando lugar a ecoti-pos que tienen diferentes capacidades de respues-ta a los factores abioacuteticos y bioacuteticos (Abrams 1994 Tognetti et al 1997) Por ejemplo los individuos de las poblaciones maacutes huacutemedas de Quercus suber (al-cornoque) presentan mayor mortandad al ser plan-tados en zonas secas que los individuos proceden-tes de poblaciones que experimentan mayor sequiacutea en su lugar de origen (Ramiacuterez-Valiente et al 2009) Igualmente el dantildeo ocasionado por Matsucoccus josephii una cochinilla endeacutemica del Mediterraacuteneo oriental es mayor en las procedencias de Pinus ha-lepensis (pino carrasco) del Mediterraacuteneo occidental que en las orientales (Mendel 1984) Aunque las es-pecies hayan sido bien seleccionadas un proyecto de revegetacioacuten puede resultar un fracaso si se uti-lizan procedencias no adaptadas a las condiciones ambientales locales Como recomendacioacuten geneacuterica lo ideal es usar MR de localidades proacuteximas a la obra pero a menudo no hay disponibilidad de dicho MR En estos casos se puede emplear MR de locali-dades cuyas condiciones ambientales sean similares con la zona de revegetacioacuten

La mayor parte de los paiacuteses con sectores foresta-les importantes han desarrollado una legislacioacuten y

mecanismos administrativos para regular y contro-lar el uso de los materiales de reproduccioacuten entre regiones Asiacute los paiacuteses de la Unioacuten Europea han definido regiones de procedencia para multitud de especies arboacutereas y arbustivas (Aliacutea et al 2005) Dicha normativa solo es aplicable a trabajos silviacute-colas por lo que si se realiza una interpretacioacuten restrictiva las obras de infraestructuras lineales no estariacutean sometidas a dicha legislacioacuten Sin embar-go muchas obras atraviesan zonas de vegetacioacuten natural por lo que el uso de MR de procedencias incompatibles con la zona de actuacioacuten no es acep-table porque podriacutea contaminar geneacuteticamente las poblaciones naturales y propiciar la peacuterdida de adaptaciones locales Si se desea integrar la infra-estructura en la dinaacutemica ecoloacutegica del territorio y garantizar el eacutexito del proyecto de revegetacioacuten a largo plazo es esencial emplear procedencias com-patibles con la zona donde se ha llevado a cabo la obra Por ello seriacutea deseable que se exija en los pliegos de condiciones de la obra el control del origen y la calidad de los MR Por ejemplo algunos aspectos baacutesicos que hay que considerar es evitar el uso de procedencias litorales en obras en zonas de clima continental y en las especies indiferen-tes a la naturaleza quiacutemica del suelo evitar usar procedencias de suelos baacutesicos en zonas siliacuteceas y viceversa Los criterios esenciales de uso de los materiales de reproduccioacuten y las regiones de proce-dencia reconocida por la legislacioacuten espantildeola para materiales forestales de reproduccioacuten se pueden consultar en Aliacutea et al (2005)

III MEacuteTODOS Y EacutePOCAS DE REVEGETACIOacuteN

1 Meacutetodos de revegetacioacuten

La revegetacioacuten con plantas lentildeosas puede reali-zarse mediante la plantacioacuten de plantas cultivadas en vivero introduccioacuten de fragmentos de plantas (raiacuteces rizomas y tallos) o mediante la siembra de semillas La introduccioacuten de fragmentos vegetativos de plantas lentildeosas es menos habitual que los otros meacutetodos Se emplea para ciertas especies cuando no es posible producir plantas en vivero yo la dis-ponibilidad y capacidad de germinacioacuten de las se-millas es muy reducida restringieacutendose su uso a ciertos trabajos de ecoingenieriacutea como la creacioacuten de fajinas lechos de ramajes y empalizadas vivas (Schiechtl 1986 Steinfeld et al 2007 veacutease el Capiacute-tulo 6 de este libro) Un requisito esencial para em-plear material vegetativo es que enraiacutece faacutecilmente

y que la humedad en el suelo sea elevada durante periacuteodos de tiempo prolongados Asiacute las estaqui-llas de algunas especies arboacutereas y arbustivas de los bosques de ribera como Populus nigra (chopo) P alba (aacutelamo) Tamarix spp (tarajes) y algunas es-pecies de Salix spp (sauces) enraiacutezan faacutecilmente en el campo Sin embargo requieren suelos muy huacutemedos durante todo el antildeo por lo que su em-pleo en proyectos de revegetacioacuten se restringe a obras que se ejecuten en situaciones con elevada disponibilidad de agua como aquellas en zonas de clima atlaacutentico o en obras proacuteximas a las riberas de los riacuteos (Domiacutenguez et al 2004) Tambieacuten pueden implantarse por estaquillas Olea europaea (olivo) y algunos pequentildeos arbustos de la familia de las Labiatae como Lavandula spp (lavandas o esplie-gos) Rosmarinus officinalis (romero) y Thymus spp

Tamarix sp

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En esta laacutemina se muestran las 10 especies citadas en las dos graacuteficas de la figura 1 en la parte su-perior izquierda majuelo (Crataegus monogyna) y taraje de flor pequentildea (Tamarix parviflora) en la parte superior derecha coscoja (Quercus coccifera) encina (Quercus ilex) y quejigo (Quercus faginea) En la imagen inferior y de izquierda a derecha ace-buche (Olea europaea var sylvestris) lentisco (Pis-tacea lentiscus) espino negro (Rhamnus lycioides) retama (Retama sphaerocarpa) y durillo (Viburnum tinus) Autor Ignacio Mola

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(tomillos) El empleo de material vegetativo directa-mente en el campo suele presentar menor supervi-vencia que el uso de plantas previamente cultivadas en viveros especialmente cuanto maacutes seco sea el ambiente de revegetacioacuten En comparacioacuten con las siembras directas y las plantas producidas en vivero a partir de semillas la revegetacioacuten con material vegetativo puede reducir la variabilidad geneacutetica de la poblacioacuten introducida Por ello es importante re-colectar el material vegetativo de una gran variedad de individuos madre (se aconsejan unos 50) y mez-clarla en la obra Ademaacutes en el caso de especies dioicas (con los sexos separados en distintos indivi-duos como el acebo (Ilex aquifolium) o los enebros y sabinas (Juniperus sp) es importante mantener la proporcioacuten de sexos (Steinfeld et al 2007)

Las siembras tienen sus ventajas e inconvenientes con respecto a las plantaciones (Tabla 2) Las siem-bras pueden ser puntuales en el espacio o realizar-se en toda la superficie (siembras a hecho) En las siembras a hecho las semillas se aplican a voleo tanto manualmente como con sembradoras acopla-das a vehiacuteculos diversos y se usa para especies de semillas medianas a pequentildeas Si se conocen a priori

las zonas favorables para la supervivencia (pe lsquosi-tios segurosrsquo sensu Harper et al 1961) las siem-bras puntuales suelen optimizar los esfuerzos en la restauracioacuten focalizando las siembras soacutelo en esas zonas Las siembras puntuales suelen realizarse con especies de semillas grandes como es el caso de las querciacuteneas siendo fundamental proteger la semilla de los depredadores (veacutease apartado VII) Indepen-dientemente del meacutetodo de siembra la emergencia de las plaacutentulas aumentaraacute enormemente si las semi-llas se cubren con tierra o alguacuten tipo de mulch Sin embargo es importante que las semillas no queden muy enterradas aconsejaacutendose que la profundidad a la que quede la semilla no exceda 15-2 veces su longitud (Pentildeuelas et al 2002 Steinfeld et al 2007)

La plantacioacuten de plantas cultivadas previamente en vivero tiene la ventaja de que son menos sensibles a factores de estreacutes abioacuteticos y a la depredacioacuten que las siembras En la plantacioacuten los plantones deben introducirse verticales la tierra debe quedar bien compactada alrededor del cepelloacuten sin que existan bolsas de aire que puedan desecar las raiacuteces asiacute como el nivel de la tierra debe quedar justo por debajo de las primeras hojas

Tabla 2 Ventajas y desventajas de las siembras con respecto de la plantacioacuten

VENTAJAS

Son maacutes baratas si se dispone de abundantes semillas de faacutecil germinacioacuten No obstante las siembras pueden encarecerse notablemente cuando se protegen de los depredadores con protectores individuales (veacutease apartado VII)

Son faacuteciles de ejecutar al no precisarse mano de obra cualificada

Las plantas obtenidas no presentan deformaciones radicales y ello puede favorecer el desarrollo lateral y en profundidad de las raiacuteces asiacute como su conductividad hidraacuteulica (Pemaacuten et al 2006)

DESVENTAJAS

Las semillas y plaacutentulas recieacuten emergidas presentan elevada depredacioacuten y mortandad respectivamente (Matiacuteas et al 2009 Goacutemez-Aparicio et al 2004) por lo que los resultados finales y el eacutexito de la revegetacioacuten son menos predecibles que con la plantacioacuten de plantas de varios meses de edad

No se puede utilizar para especies con baja capacidad germinativa o cuya germinacioacuten no sea coetaacutenea o que se retrasa mucho en el tiempo Esto restringe el uso de la siembra a aquellas plantas lentildeosas que producen gran cantidad de semillas baratas y faacuteciles de germinar

No es aconsejable utilizar la siembra de plantas lentildeosas en zonas con elevado estreacutes ambiental y gran cantidad de depredadores de semillas

Si la siembra es un eacutexito y el porcentaje de planta emergida es elevado se precisan aplicar aclareos para llegar a una densidad adecuada Con la plantacioacuten se controla mejor la densidad final

2 Eacutepocas del antildeo para la revegetacioacuten

Tanto la plantacioacuten como la siembra solamente se deben acometer durante determinados periacuteodos del antildeo en los que se garantice el enraizamiento de las plantas o la germinacioacuten de las semillas El calendario de revegetacioacuten por tanto lo deben determinar los ritmos bioloacutegicos de las plantas y no el calendario de la obra civil Los periacuteodos adecuados para realizar las siembras o plantaciones deben decidirse teniendo en cuenta los periacuteodos de estreacutes que limitan el desarro-llo de las plaacutentulas en la zona de trabajo Como regla general nunca debe revegetarse durante los periacuteodos en los que las plantas estaraacuten limitadas por escasez de precipitacioacuten y bajas temperaturas (Figura 2) Nun-ca se debe realizar una plantacioacuten si el suelo estaacute seco En la mayoriacutea de las zonas de clima mediterraacute-neo el verano es el periacuteodo de mayor estreacutes para las plantas En zonas con bajas temperaturas invernales el invierno tambieacuten es otro periacuteodo muy limitante

La base ecofisioloacutegica de la toma de decisioacuten sobre la fecha de revegetacioacuten se fundamenta en que la capacidad de las plantas joacutevenes para sobrevivir a la aridez estival depende en buena medida del de-sarrollo de un extenso y profundo sistema radical al comienzo del verano (Padilla y Pugnaire 2007 Cuesta et al 2010a) Ello depende de la velocidad de creci-miento de las raiacuteces de cada especie pero tambieacuten del momento en que se produce la revegetacioacuten Si se realiza muy proacutexima al verano y el verano es seco las plantas no tendraacuten tiempo suficiente para expandir su

sistema radical y sufriraacuten un fuerte estreacutes hiacutedrico Por otro lado plantar cuando el suelo estaacute muy friacuteo no es uacutetil ya que las raiacuteces de la mayoriacutea de las plantas lentildeosas no crecen cuando la temperatura del suelo permanece por debajo de los 5-10 degC (Corchero de la Torre et al 2002 Aacutelvarez-Uriacutea y Koumlrner 2007) En zonas de clima mediterraacuteneo el crecimiento de las raiacuteces es elevado en la primera mitad del otontildeo y en primavera y en los sitios de clima atlaacutentico el verano tambieacuten puede ser un periacuteodo de raacutepido crecimien-to siempre que el suelo se mantenga huacutemedo (Lyr y Hoffmann 1967 Corchero de la Torre et al 2002)

En la mayoriacutea de las zonas mediterraacuteneas el periacuteodo huacutemedo del antildeo comprende desde mediados de octu-bre a finales de abril En zonas de clima mediterraacuteneo e inviernos suaves se aconseja que la revegetacioacuten se haga pronto durante el periacuteodo huacutemedo del antildeo En los lugares en los que el invierno es muy friacuteo la revegetacioacuten debe retrasarse hasta el final del invier-no o a comienzos de la primavera (Figura 2) por-que las heladas pueden matar las plaacutentulas emergidas en otontildeo en el caso de las siembras (Pentildeuelas et al 2002) y descalzar y secar las plantas en el caso de las plantaciones En este contexto otra alternativa es adelantar la plantacioacuten y realizarse muy pronto en el otontildeo pero para ello es fundamental que las precipi-taciones otontildeales hayan comenzado En ambientes de clima atlaacutentico donde los veranos no sean muy secos las plantaciones se pueden realizar hasta el final de la primavera y comenzarse muy pronto en el otontildeo e incluso al final del verano

Figura 2 Esquema de los periacuteodos idoacuteneos de revegetacioacuten con plantas lentildeosas en zonas de clima mediterraacuteneo y atlaacutentico (columnas izquierda y derecha respectivamente) tanto de inviernos suaves como de inviernos friacuteos respectivamente (filas superior e inferior respec-tivamente) La altura de la barra simboliza la idoneidad de la fecha de revegetacioacuten Dentro de cada mes se han diferenciado la primera y segunda quincena

Clima mediterraacuteneo

Muyidoacuteneo

Nadaidoacuteneo

Muyidoacuteneo

Nadaidoacuteneo

Inviernossuaves

Inviernosfrios

Clima atlaacutentico

Muy idoacuteneo

Nada idoacuteneo

Muy idoacuteneo

Nada idoacuteneo

Clima mediterraacuteneo Clima atlaacutentico

Inviernos suaves

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Enero Feb Marzo Abril Mayo Junio Julio Agos Sept Oct Nov Dic Enero Feb Marzo Abril Mayo Junio Julio Agos Sept Oct Nov Dic

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Un aspecto muy importante para decidir la eacutepoca de plantacioacuten en climas de inviernos suaves es el haacutebito foliar de las especies (caducifolias frente a perennifolias) La plantacioacuten de caducifolias de in-vierno a partir de la segunda mitad del otontildeo y du-rante el invierno no propicia la formacioacuten de raiacuteces durante este periacuteodo ya que el crecimiento principal de sus raiacuteces no se produce hasta la formacioacuten de follaje en la brotacioacuten primaveral (Lyr y Hoffmann 1967 Sardaacute et al 2005) Por tanto para las especies caducifolias las plantaciones deben retrasarse has-ta unas semanas antes de la brotacioacuten En cambio las especies perennifolias siacute pueden producir raiacuteces durante el invierno siempre que la temperatura del

suelo se mantenga por encima de los 5-10 degC (Lyr y Hoffmann 1967 Riedacker 1976 Corchero de la Torre et al 2002) ya que en las especies perennifolias la formacioacuten de las raiacuteces depende en buena medida de la fotosiacutentesis del momento (van den Driessche 1991b Maillard et al 2004) En los casos en los que la obra combine tanto especies caducifolias y peren-nifolias se recomienda que se retrase la plantacioacuten hacia el final del periacuteodo friacuteo y se planten a la vez los dos tipos de plantas para reducir los costes de plantacioacuten Por ejemplo en muchas zonas de clima mediterraacuteneo continental este momento puede ser entre la segunda quincena de febrero y la primera quincena de marzo

IV CALIDAD MORFOLOacuteGICA Y FISIOLOacuteGICA DE LAS PLANTAS

Se considera que una planta es de calidad cuan-do es capaz de sobrevivir y crecer adecuadamente en un medio determinado y por tanto cumplir los objetivos establecidos en un plan de revegetacioacuten (Ritchie 1984 Villar-Salvador 2003 Cortina et al 2006) La supervivencia y crecimiento de las plantas utilizadas en los proyectos de revegetacioacuten estaacuten li-gados a su balance de carbono agua y nutrientes minerales Dicho balance depende en uacuteltima instan-cia de los atributos morfoloacutegicos y fisioloacutegicos de las plantas (Gaudet y Keddy 1988 Burdett 1990) A escala intraespeciacutefica las plantas pueden mostrar grandes diferencias en sus atributos funcionales de-pendiendo de la plasticidad fenotiacutepica de la especie la procedencia de la semilla y las condiciones am-bientales durante el cultivo en vivero y el transporte al lugar de plantacioacuten (Coutts 1982 Balaguer et al 2001 Vilagrosa et al 2003 Mena-Petite et al 2004 Villar-Salvador et al 2004 Villar-Salvador et al 2008 Cuesta et al 2010a) No existe un uacutenico modelo de calidad de planta ideal para cada especie Una plan-ta con determinadas caracteriacutesticas funcionales pue-de ser vaacutelida para ciertos objetivos de revegetacioacuten pero no para otros Por tanto de forma ideal las caracteriacutesticas funcionales de las plantas deberiacutean diferir en funcioacuten de las caracteriacutesticas ambientales del lugar de plantacioacuten (Rose et al 1990) La calidad de las plantas cambia en el tiempo variando con su estado fenoloacutegico y su desarrollo ontogeneacutetico

Por ejemplo la resistencia a las heladas en muchas plantas del mundo templado se incrementa a lo lar-go del otontildeo e invierno y se reduce en primavera en respuesta a las horas de luz y la temperatura ambiental (Grossnickle 1992) La calidad de la planta tambieacuten puede cambiar con su edad Nicolaacutes et al (2004) observaron que los plantones de dos savias de Quercus faginea (quejigo) mostraron menor ca-pacidad de producir nuevas raiacuteces supervivencia y crecimiento que los de una savia

La importancia de la calidad de la planta en el eacutexito de un proyecto de revegetacioacuten se incrementa con el grado de estreacutes ambiental en el lugar de la plantacioacuten (del Campo et al 2007 Cuesta et al 2010a) si bien en situaciones de fuerte estreacutes ambiental otros aspectos del proyecto de revegetacioacuten como la preparacioacuten del suelo y los cuidados posplantacioacuten pueden tener un papel maacutes relevante que la calidad de la planta (Navarro et al 2006a) Finalmente las consecuencias del empleo de planta de baja calidad suelen ser muy aparentes a corto plazo Pero a veces las consecuen-cias son solo aparentes muchos antildeos maacutes tarde tal como sucede con las deformaciones radicales causa-das por algunos tipos de contenedores que reducen la estabilidad estructural de los aacuterboles a largo plazo (Lindstroumlm y Rune 1999) En la Tabla 3 se recogen algunas recomendaciones baacutesicas para garantizar un miacutenimo de calidad en las plantas

Tabla 3 Recomendaciones baacutesicas para garantizar un miacutenimo de calidad de planta en los trabajos de revegetacioacuten con plantas lentildeosas

Utilizar preferentemente plantas cultivadas en contenedor que plantas cultivadas a raiacutez desnuda en plantaciones de zonas secas o muy friacuteas Las plantas cultivadas en contenedor casi siempre tienen mayor supervivencia que las cultivadas a raiacutez desnuda (South et al 2005) especialmente en especies perennifolias

Evitar plantas con raiacuteces severamente deformadas (Figura 3) especialmente en aacuterboles porque pueden comprometer la estabilidad estructural a largo plazo En este sentido no usar plantas cultivadas en contenedores que carezcan de sistemas antiespiralizantes como las macetas troncocoacutenicas empleadas en el cultivo de especies ornamentales Esta exigencia probablemente sea menos importante para arbustos de pequentildeo porte

Usar plantas cultivadas en contenedores de al menos 250 ml para plantaciones de zonas secas La supervivencia y crecimiento de las plantas estaacuten directamente relacionados con el volumen del contenedor (South et al 2005 Tsakaldimi et al 2005 Domiacutenguez-Lerena et al 2006) En zonas huacutemedas se pueden usar contenedores maacutes pequentildeos pero la duracioacuten del cultivo (edad de la planta) deberaacute ser menor especialmente en especies de raacutepido crecimiento

No usar plantas cuyos cepellones no esteacuten consolidados es decir que el conglomerado de sustrato retenido por las raiacuteces no se desmorone cuando las plantas se extraigan de las bandejas o durante la manipulacioacuten en la plantacioacuten

Rechazar plantas con podredumbres o plagas y en el caso particular de las especies perennifolias evitar plantas con follaje cloroacutetico y senescente Puede indicar que las plantas esteacuten enfermas o tengan graves deficiencias nutricionales En caso de enfermedades estas pueden propagarse al resto de plantas del proyecto y a las poblaciones naturales circundantes

Desechar las plantas con heridas recientes en los tallos especialmente en el cuello de la raiacutez

No emplear cultivos que tengan dos o maacutes individuos por contenedor En el campo competiraacuten entre siacute y tendraacuten menor vigor

Evitar plantas cuya parte aeacuterea esteacute en crecimiento en el momento de la plantacioacuten Tienen una escasa resistencia a factores de estreacutes ya que las plantas en crecimiento relajan sus mecanismos de resistencia a factores de estreacutes

No llevar al campo plantas que han sido cultivadas en un invernadero sin que se hayan previamente aclimatado (endurecido) al menos un mes al aire libre y a ser posible expuestas a pleno sol

Evitar plantas que muestren un excesivo desequilibrio entre el tamantildeo de su parte aeacuterea y radical En general no son recomendables tanto partes aeacutereas mucho maacutes grandes que las raiacuteces como lo contrario A modo orientativo un pino carrasco (P halepensis) o una encina (Q ilex) cuya altura sea de una a dos veces la altura del contenedor puede ser considerado normal Valores maacutes altos o inferiores no son recomendables Una revisioacuten de la importancia del tamantildeo de las plantas en su establecimiento en campo puede encontrarse en Navarro et al (2006b) En general dentro de los rangos de altura mencionados las plantas de mayor tamantildeo normalmente tienen mayor supervivencia y crecimiento en campo que las maacutes pequentildeas (Villar-Salvador et al 2004 Villar-Salvador et al 2008 Cuesta et al 2010a) (Figura 3)

Evitar plantas cuyos cepellones esteacuten secos al salir del vivero o al llegar a la obra asiacute como plantas con gran cantidad de hierbas en los alveacuteolos

Evitar el uso de plantas cultivadas en viveros emplazados en localidades de inviernos suaves para proyectos de revegetacioacuten en localidades friacuteas aunque la procedencia del material de reproduccioacuten sea adecuada (Mollaacute et al 2006) Si no queda maacutes remedio que utilizar este tipo de planta una solucioacuten es adelantar las plantaciones a mitad del otontildeo para que la planta se aclimate al friacuteo en el campo

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La calidad de una planta puede alterarse al ser llevada al lugar de plantacioacuten El trato rudo de las plantas por los operarios o su desecacioacuten causada por un prolongado e inadecuado almacenamiento y transporte asiacute como una incorrecta plantacioacuten son algunos de los factores que pueden mermar el vigor de la planta de mejor calidad y arruinar

el proyecto de revegetacioacuten maacutes esmerado (Mc-Kay 1997 Vallas-Cuesta et al 1999 Landis et al 2010) Por ejemplo los plantones de P halepensis reducen fuertemente su supervivencia y crecimien-to cuando alcanzan un potencial hiacutedrico al alba inferior a -2 MPa antes de su plantacioacuten (Vallas-Cuesta et al 1999)

A B

C

Figura 3 (A) Detalle de dos plantones de una savia de pino carrasco de tamantildeo de la parte aeacuterea y proporcioacuten de parte aeacuterea con respecto a la parte radical muy distinta La planta grande presentoacute mayor supervivencia y crecimiento plantado con alta densidad de hierba que la planta pequentildea (B) Plantones de Quercus faginea cultivados con crecientes niveles de fertilizante Los dos plantones pequentildeos de la izquierda fueron cultivados con nada o muy poco fertilizante mostrando menor supervivencia y crecimiento en campo que los otros tres plantones grandes que recibieron mayor fertilizacioacuten durante su cultivo (C) Detalle de una raiacutez revirada de Pistacia terebinthus por un mal manejo del cultivo (Fotos Pedro Villar)

La desecacioacuten de las plantas durante el transporte y almacenamiento de la planta afecta menos a las plantas en contenedor que a las de raiacutez desnuda ya que el agua almacenada en los cepellones retrasa su desecacioacuten (Mena-Petite et al 2004) Por esta razoacuten es fundamental que los cepellones de las plantas en contenedor esteacuten bien hidratados al salir del vivero y en el momento de la plantacioacuten aunque ello su-ponga un incremento de los costes de transporte Finalmente las plantas almacenadas en la obra de-beraacuten mantenerse regadas si no van a ser plantadas inmediatamente

Las plantas se deben transportar al lugar de trabajo sin que se recalienten y desequen Por ello no de-ben exponerse al viento ni al sol Las plantas a raiacutez desnuda deben transportarse envueltas en bolsas de papel o alguacuten material semipermeable o en cajas de cartoacuten Lo ideal es que se transporten refrige-radas Si las plantas a raiacutez desnuda no van a ser usadas inmediatamente al llegar a la obra deberaacuten ser aviveradas o guardadas en una caacutemara refrige-rada (Landis et al 2010) En el caso de las plantas en contenedor deberaacuten permanecer almacenadas en lugares frescos y sombreados (pero no a oscuras) hasta su uso debieacutendose programar bien los traba-jos de plantacioacuten para minimizar el periacuteodo de alma-cenamiento y evitar asiacute la desecacioacuten de la planta

Muchas plantas desarrollan interacciones mutualistas con los microorganismos del suelo Las simbiosis con hongos (micorrizas) son de las maacutes importantes y fa-cilitan a la planta la toma de nutrientes minerales y agua lo que es importante para superar las eacutepocas de sequiacutea y vivir en suelos pobres A cambio las mico-rrizas reciben carbohidratos formados por las plantas (Moora y Zobel 2010) Las poblaciones de microorga-nismos del suelo son muy reducidas en lugares muy

degradados o en las obras que han usado materiales esteacuteriles para la construccioacuten de terraplenes y don-de no existe tierra vegetal Ello unido a la pobreza de nutrientes del suelo y las condiciones de elevado estreacutes hiacutedrico dificulta auacuten maacutes la colonizacioacuten de las plantas lentildeosas especialmente las de etapas in-termedias y tardiacuteas de la sucesioacuten Por tanto puede ser recomendable la introduccioacuten de estos microor-ganismos ya sea mezclando esporas con la siembra o mediante la plantacioacuten de individuos previamente micorrizados en el vivero Esta uacuteltima opcioacuten es maacutes recomendable por ser maacutes barata a la vez que actuacutea como fuente de esporas para toda la zona (Moora y Zobel 2010) No obstante la mayoriacutea de las plantas cultivadas en viveros se micorrizan solas durante su cultivo con micorrizas tiacutepicas de vivero o incluso de hongos maacutes frecuentes en ambientes forestales si los viveros se localizan en la proximidad de masas fo-restales Las micorrizas y otras simbiosis con otros microorganismos pueden aumentar el crecimiento y la supervivencia de los individuos introducidos (Titus y del Moral 1998 Requena et al 2001 Thrall et al 2005 Domiacutenguez et al 2006) a la vez que facilitan la formacioacuten de redes de micelios que ayudan a fijar el suelo y la colonizacioacuten de las raiacuteces de otras especies (Dodd 2000) Ademaacutes confieren ventajas a especies normalmente maacutes tardiacuteas en la sucesioacuten (pe lentildeo-sas o herbaacuteceas perennes de vida larga) frente a es-pecies pioneras como las hierbas anuales Por ejem-plo Salsola kali una planta anual problemaacutetica en los taludes de las carreteras porque la mata seca pone en peligro a los conductores al rodar sobre la calzada se mostroacute maacutes competitiva que las especies herbaacuteceas perennes cuando estas no se hallaban micorrizadas Sin embargo la inoculacioacuten con micorrizas hizo que las plantas perennes fueran maacutes competitivas que S kali reduciendo notablemente su presencia en la co-munidad (Allen y Allen 1984)

V DISTRIBUCIOacuteN ESPACIAL DE LAS PLANTAS

Los factores ambientales importantes para la vida de los organismos pueden variar en el espacio a escalas muy diversas desde variaciones a escala regional hasta variaciones muy pequentildeas de apenas unos centiacutemetros (Lechowizc y Bell 1991) Estas variaciones deben ser tenidas en cuenta a la hora de distribuir en el espacio las plantas Por ejemplo la orientacioacuten de los taludes o la posicioacuten dentro del talud conlleva cambios en la disponibilidad de recursos y condicio-nes ambientales que deben ser consideradas para decidir la localizacioacuten de las diferentes especies la

densidad y la distribucioacuten de los individuos Muy frecuentemente se organizan los individuos seguacuten distribuciones regulares (pe cuadrangular rectan-gular tresbolillo lineal) Sin embargo dichas dis-tribuciones limitan la posibilidad de incorporar la variacioacuten espacial en los factores ambientales que ocurre a escalas pequentildeas (Beckage y Clark 2003) La revegetacioacuten basada en la introduccioacuten de planto-nes irregularmente espaciados o formando manchas que imiten la distribucioacuten de la vegetacioacuten natural puede favorecer el desarrollo de lsquoislas de recursosrsquo

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Talud de terrapleacuten de 30 antildeos de antiguumledad de una carretera comarcal de la provincia de Maacutelaga En la parte superior de la fotografiacutea se puede apreciar la presencia de distintas especies de lentildeosas del geacutene-ro Ulex (Foto Pablo Garciacutea-Palacios)

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mejorar el banco de semillas y facilitar el recluta-miento de nuevas plantas acelerando la dinaacutemica sucesional (Maestre 2003) Ademaacutes conocer a priori la distribucioacuten espacial de los factores ambientales puede ayudar a seleccionar los mejores lugares de plantacioacuten y maximizar la supervivencia (pe lsquore-cruitment hotspotsrsquo sensu Hampe et al 2008) Tam-bieacuten se pueden crear manchas de un alto conteni-do en recursos mediante fertilizacioacuten localizada en puntos concretos o bien mediante la construccioacuten de microcuencas u otras estructuras de retencioacuten de agua (veacutease Capiacutetulo 6) De este modo las tareas de revegetacioacuten podriacutean centrarse en estas manchas optimizando asiacute los recursos y evitando plantar o sembrar en zonas donde la probabilidad de marras se incrementa Por ejemplo en un estudio espacial a pequentildea escala de las propiedades edaacuteficas Maes-tre et al (2003) observaron que las manchas con alta proporcioacuten de suelo desnudo alto contenido de arena o alta resistencia a la penetracioacuten comprome-tiacutean la supervivencia de los plantones A modo de ejemplo las especies lentildeosas pioneras y tolerantes al estreacutes pueden ser introducidas en zonas donde se ha eliminado la hierba en micrositios maacutes xeacutericos como zonas convexas o con peores suelos laderas en solana En cambio las plantas lentildeosas interme-dias y tardiacuteas de la sucesioacuten o aquellas que tengan altos requerimientos en recursos y baja tolerancia a la sequiacutea se deberiacutean plantar en parches con elevado contenido de recursos en sitios que tengan suelos maacutes profundos poca pedregosidad exposiciones de umbriacutea o las zonas bajas de los taludes que almace-nan maacutes humedad y nutrientes Las zonas del talud con rocas en principio no necesitan recibir ningu-na actuacioacuten De este modo se pueden conseguir

sistemas maacutes heterogeacuteneos con una estructura en parches que facilitan la integracioacuten paisajiacutestica de las obras a la vez que se aumenta la diversidad bio-loacutegica Un aspecto que se debe contemplar es que el tipo de preparacioacuten del suelo va a condicionar la distribucioacuten espacial de las plantas En concreto los subsolados lineales imponen un grado de regu-laridad en la distribucioacuten de las plantas mientras que las preparaciones puntuales (veacutease apartado VI) permiten una mayor heterogeneidad

La densidad de plantas que se introduzcan inicial-mente dependeraacute de la cobertura final que se desee el tamantildeo de la especie de adulta y la mortandad esperada de las especies en el contexto ambiental de la obra Por ejemplo si se desea una cobertura del suelo medio alta (50-80) y se desea introducir un arbusto de bajo porte y una especie arboacuterea ambas con una supervivencia estimada del 50 a corto pla-zo la densidad de plantacioacuten deberaacute ser mucho maacutes alta en a primera que en la segunda 20000 frente a 700 pies ha-1 La densidad de plantacioacuten tambieacuten debe contemplar la ecologiacutea de las especies y los condicionantes ambientales del lugar de la obra Asiacute las especies que son ecoloacutegicamente semejantes o esteacuten muy emparentadas tenderaacuten a competir maacutes intensamente entre siacute que aquellas con las caracteriacutes-ticas contrarias (Valiente-Banuet y Verduacute 2008) por lo que plantaciones mixtas de especies ecoloacutegicamente semejantes deberaacuten contemplar densidades menores En lugares de mayor aridez o pobreza de nutrientes en el suelo tambieacuten deberaacuten contemplar densidades inicialmente mayores previendo una mayor mortan-dad Densidades elevadas de aacuterboles conllevaraacuten a la larga un empobrecimiento de arbustos helioacutefilos

VI PREPARACIOacuteN DEL SUELO

La compactacioacuten del sustrato es uno de los factores que maacutes dificulta el establecimiento de la vegetacioacuten lentildeosa al limitar la infiltracioacuten de agua y la penetra-cioacuten en profundidad de las raiacuteces la aireacioacuten y el volumen uacutetil de suelo para las plantas (Bejarano et al 2010) Para mitigar estos efectos es muy impor-tante realizar una preparacioacuten fiacutesica del suelo previa a la plantacioacuten La importancia de la preparacioacuten del suelo se incrementa cuanto maacutes aacuterido sea el clima o cuanto maacutes se retrase la fecha de plantacioacuten (Que-rejeta et al 2001 Saquete et al 2006 Palacios et al 2009) Las preparaciones maacutes intensas es decir las que afectan a un mayor volumen de suelo tienen un mayor efecto sobre el desarrollo de las plantas

Las preparaciones del suelo mecaacutenicas son habi-tualmente maacutes efectivas que las manuales ya que remueven mayor volumen de suelo En una siembra de Q ilex sobre margas yesiacuteferas un subsolado de 50-60 cm de profundidad incrementoacute la superviven-cia un 700 al final del verano con respecto a ho-yos manuales de 10 cm de profundidad (Nicolaacutes et al 1997 Figura 4) En una plantacioacuten de Q faginea (quejigo) en terrenos agriacutecolas abandonados no se observaron diferencias de supervivencia entre un subsolado y hoyos efectuados con retroexcavadora pero siacute de crecimiento siendo mayor en el segundo caso que produjo una mayor remocioacuten del suelo (Nicolaacutes et al 2004)

Las preparaciones del suelo que pueden aplicarse en obras de infraestructuras lineales pueden clasifi-carse en dos categoriacuteas preparaciones puntuales y preparaciones lineales Las preparaciones puntuales engloban a casillas hoyos y microcuencas bien he-chos a mano o bien con picos mecaacutenicos barrenas helicoidales o retroexcavadora o una combinacioacuten de medios mecaacutenicos y manuales (Serrada 2000) En algunas obras se utilizan inyectores de agua a alta presioacuten para abrir el hoyo Las preparaciones puntuales no implican necesariamente la apertura de hoyos ni el volteo de los horizontes del suelo

especialmente las realizadas con excavadora o pi-cos mecaacutenicos Por ejemplo para los ahoyados con retroexcavadora se debe introducir el cazo hasta la profundidad deseada y levantar el suelo sin voltear el cazo para finalmente dejarlo caer de nuevo en el mismo punto Posteriormente el operario abriraacute con un barroacuten o una azada un pequentildeo hueco don-de introducir la planta o la semilla sobre el suelo esponjado En el caso de las retroexcavadoras es preferible no usar un cazo sino solo untildeas El cazo puede ocasionar compactacioacuten en su roce con las paredes y el fondo del hoyo que las untildeas evitan

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Figura 4 Evolucioacuten de la emergencia y supervivencia de siembras de bellotas de Quercus ilex (encina) realizadas sobre dos tipos de prepara-cioacuten del suelo subsolados de 50-60 cm de profundidad y casillas hechas a mano de 10 cm de profundidad La figura estaacute dibujada a partir de los datos de Nicolaacutes et al (1997) El experimento se realizoacute sobre margas yesiacuteferas en Guadalajara La siembra se hizo en febrero y se protegioacute de los depredadores con tubos protectores de 30 cm La potencia germinativa del lote de bellotas empleado en el estudio fue del 55 determinado en condiciones de laboratorio

Las preparaciones lineales engloban a los subsola-dos lineales que consisten en realizar cortes al sue-lo normalmente siguiendo las curvas de nivel con un apero denominado subsolador o ripper montado sobre un tractor o un buldoacutezer El subsolador puede profundizar hasta unos 60-80 cm El subsolado tam-poco produce una alteracioacuten en los horizontes del suelo y tiene una gran capacidad de infiltrar la esco-rrentiacutea superficial de agua En superficies llanas el subsolado se puede hacer cruzado La mecanizacioacuten

de la preparacioacuten del suelo dependeraacute de la pen-diente de los taludes Una profusioacuten de detalles so-bre teacutecnicas de preparacioacuten del suelo puede encon-trarse en Serrada (2000) y Steinfeld et al (2007) Como recomendacioacuten general en caso de prepara-ciones puntuales el hoyo de trabajo debe tener una dimensioacuten miacutenima de 40 times 40 times 40 cm

Los meacutetodos destinados a incrementar la fertilidad del suelo se tratan en detalle en el Capiacutetulo 6 de este libro

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VII CUIDADOS POSPLANTACIOacuteN

Los cuidados posplantacioacuten son aquellas medidas encaminadas a garantizar el establecimiento de las plantas una vez realizada la plantacioacuten o la siembra Se aplican durante un breve periacuteodo de tiempo que variacutea entre 1-5 antildeos dependiendo del tratamiento pero habitualmente no pasan de los dos antildeos que es el periacuteodo de garantiacutea que tiene la empresa cons-tructora Los principales cuidados posplantacioacuten son los siguientes

1 Riegos

Los riegos son muy importantes para garantizar nive-les adecuados de supervivencia en localidades con escasa precipitacioacuten en antildeos muy secos cuando se trabaja con especies poco resistentes a la sequiacutea o se planta fuera de las eacutepocas adecuadas (Jimeacutenez et al 2007 Rey Benayas 1998) No obstante la necesi-dad de riego se reduce significativamente o incluso pueden ser innecesaria si la toma de decisiones y la ejecucioacuten de las otras actividades de revegetacioacuten se hacen correctamente como la seleccioacuten correcta de especies la preparacioacuten del suelo y sobre todo la revegetacioacuten se hace en el periacuteodo adecuado

Habitualmente se diferencian los riegos de esta-blecimiento y los de mantenimiento Los primeros se dan inmediatamente despueacutes de la plantacioacuten y su uso se suele restringir a situaciones en las que el suelo tiene poca humedad en el momento de la plantacioacuten yo las plantaciones se han hecho muy tardiacuteamente Los riegos de mantenimiento se suelen aplicar solamente en los periacuteodos de mayor aridez En ambientes mediterraacuteneos se suele recomendar la aplicacioacuten de entre 20 y 40 l por planta en cada evento de riego (Serrada 2000) que no deben ac-tivar el crecimiento aeacutereo de la planta ya que la resistencia a factores de estreacutes se reduce El riego conviene repartirlo durante el periacuteodo de sequiacutea en lugar de aplicarse en un uacutenico riego en mitad del periodo de sequiacutea Los riegos se aplican a mano por medio de mangueras conectadas a cisternas moacutevi-les (Figura 5) Ahora bien esto solo es posible si la cisterna de riego tiene acceso al lugar de trabajo y en terrenos de poca pendiente Otra alternativa es montar un sistema de riego por goteo conectado a unos depoacutesitos de agua que perioacutedicamente son rellenados Esta opcioacuten es cara y se restringe ha-bitualmente a las medianas aunque tambieacuten seriacutea deseable en taludes con pendientes pronunciadas y en las que el riego se va a mantener durante varios

antildeos Los riegos deben planificarse correctamente porque encarecen enormemente los costes de los proyectos de revegetacioacuten

2 Control de la competencia con otras plantas

En la restauracioacuten de infraestructuras lineales habitual-mente se persiguen dos objetivos ecoloacutegicos proteger al suelo de la erosioacuten y acelerar la sucesioacuten secundaria consiguiendo asiacute comunidades de plantas maacutes desa-rrolladas y estables El primer objetivo se puede con-seguir estableciendo una cubierta de hierbas densa mientras que ambos objetivos se pueden alcanzar con especies lentildeosas Sin embargo las especies lentildeosas crecen maacutes despacio que las hierbas por lo que a corto plazo el primer objetivo se puede alcanzar maacutes raacutepidamente con hierbas Ambos objetivos se ven fa-vorecidos por separado cuando se incrementa la fertili-dad del suelo y la disponibilidad hiacutedrica Sin embargo bajo estas condiciones la competencia entre plantas herbaacuteceas y lentildeosas es maacutes intensa (Loumlf 2000 Rey Benayas et al 2005) y por tanto estos dos objetivos primordiales pueden entrar en conflicto

La mayoriacutea de especies herbaacuteceas que se desarro-llan en los taludes son ruderales anuales esto es especies que completan su ciclo de vida en un antildeo y que estaacuten adaptadas a vivir en sitios muy per-turbados (Grime 2001) Ademaacutes son maacutes eficaces en explotar los recursos del suelo que las especies lentildeosas porque crecen maacutes raacutepidamente tienen raiacute-ces con una elevada longitud especiacutefica y una ma-yor capacidad intriacutenseca de absorcioacuten de nutrientes (Grime and Hunt 1975 Eissenstat 1992) La compe-tencia entre las especies herbaacuteceas y lentildeosas es maacutes intensa cuanto menor es la disponibilidad de recursos edaacuteficos de forma que la implantacioacuten de las plantas lentildeosas suele fracasar si no se eliminan las hierbas (Rey Benayas et al 2005 Goacutemez-Aparicio 2009 Cuesta et al 2010a Cuesta et al 2010b) Sin embargo para una especie dada la capacidad com-petitiva de los plantones lentildeosos depende de sus atributos funcionales los cuales se pueden deter-minar seguacuten coacutemo se cultive la planta en el vive-ro (van den Driessche 1991a Villar-Salvador et al 2004) Asiacute en P halepensis los plantones de gran tamantildeo y elevada concentracioacuten de nitroacutegeno en sus tejidos tienen mayor capacidad de competencia con las hierbas que los plantones de atributos contrarios (Figura 3 Cuesta et al 2010a)

A B

C D

Figura 5 Detalles de tubos de riego por goteo en la mediana de la Autoviacutea A-9 (Almeriacutea) (A) y en una ladera plantada de encina en Cazorla (Jaeacuten) (B) una cisterna de agua para alimentar un sistema de riego por goteo en una repoblacioacuten en Ayora (Valencia) (C) y regando a mano con manguera conectada a una cuba situada en la parte superior de la infraestructura en un talud del tren de alta velocidad a Maacutelaga (Humil-ladero) (D) (Fotos Pedro Villar y Marisa Martiacutenez)

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Un aumento de los recursos edaacuteficos sobre todo agua relaja la competencia tendieacutendose a interaccio-nes maacutes o menos neutras en situaciones intermedias de disponibilidad de recursos edaacuteficos (Figura 6) Sin embargo cuando los recursos edaacuteficos superan un cierto umbral y se hacen muy abundantes las hier-bas y las lentildeosas pueden volver a experimentar com-petencia principalmente por la luz Sin embargo el resultado de la competencia con las hierbas diferi-raacute dependiendo del tipo de planta lentildeosa Para las

especies pioneras de la sucesioacuten la mayoriacutea de las cuales son helioacutefilas se traduciraacute en un efecto nega-tivo ya que las hierbas impediraacuten el acceso a la luz Sin embargo las especies intermedias y tardiacuteas de la sucesioacuten que suelen regenerarse mejor en ambientes de luz moderada sufriraacuten menos la competencia que las pioneras de la sucesioacuten La Figura 6 sintetiza este proceso y puede constituir un modelo conceptual de toma de decisiones sobre el control de las especies herbaacuteceas cuando se introducen especies lentildeosas

Resp

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baacutece

as

Especies tardiacuteas en la sucesioacuten

Herbaacuteceas positivas para especies tardiacuteas en la sucesioacuten

Herbaacuteceas negativas se recomienda eliminarlas

Especies pioneras

+

0

1- Disponibilidad de recursos en el suelo +

Figura 6 Modelo conceptual del efecto de las plantas herbaacuteceas sobre las lentildeosas dependiendo de su estrategia ecoloacutegica (pionera frente a tardiacutea de la sucesioacuten) y el nivel de recursos disponibles en el suelo Por encima de la liacutenea punteada estos efectos son positivos y por debajo son negativos

No debe eliminarse la cubierta de hierbas en toda la superficie del talud cuando se desea implantar las lentildeosas Basta eliminar la hierba en un halo de 05-1 m de diaacutemetro alrededor de cada plantoacuten para relajar la competencia (Figura 7) De esta manera a la vez que reducimos la competencia sobre las espe-cies lentildeosas de intereacutes se garantiza una cobertura del suelo suficiente para evitar la erosioacuten y fomentar otras funciones ecoloacutegicas como el incremento de materia orgaacutenica en el suelo y la creacioacuten de haacutebitat para otros organismos

El control de la competencia herbaacutecea se puede realizar por procedimientos fiacutesicos yo quiacutemicos Los meacutetodos fiacutesicos implican la remocioacuten de la hier-ba por medio de desbroces y escardas o el impedi-mento de su crecimiento por medio de una barrera

fiacutesica o mulch Estos uacuteltimos consisten en piedras o telas y mantas permeables de fibras vegetales o sinteacuteticas que se colocan pegadas al suelo alrede-dor del plantoacuten y que dificultan la emergencia de las plaacutentulas de herbaacuteceas (Pentildeuelas et al 1996) y reducen la evaporacioacuten de agua del suelo de forma anaacuteloga a como lo hace la hojarasca de muchas plantas (Rebollo et al 2001) Las escardas o des-broces deben planificarse cuando la hierba tiene un tamantildeo suficiente para competir con la lentildeo-sa Realizarlas demasiado pronto no es efectivo y probablemente habraacute que repetirlas maacutes adelante mientras que tampoco se deben retrasar mucho porque la hierba ya estaraacute compitiendo intensa-mente con la planta lentildeosa Los meacutetodos quiacutemicos de control de la competencia herbaacutecea se realizan con herbicidas siendo recomendable aplicar una

mezcla de herbicidas de contacto y residuales es-peciacuteficos para gramiacuteneas compuestas o legumino-sas las familias predominantes en los herbazales de los taludes Es esencial que la planta lentildeosa sea protegida por un tubo al aplicarse el herbicida La eliminacioacuten total de las hierbas alrededor de la planta lentildeosa deja el suelo desnudo favoreciendo

la evaporacioacuten Por ello no se deben retirar los restos de las hierbas en las escardas o siegas porque reducen la evaporacioacuten de agua y el reca-lentamiento del suelo (Papavassiliou 1991 Sack y Grubb 2002) aportan fertilidad al suelo dificultan la emergencia de futuras hierbas y dicha retirada encarece el mantenimiento

A B

Figura 7 (A) Trabajadores segando la hierba en un talud del tren de alta velocidad a Maacutelaga (Humilladero) (B) Foto del halo sin hierba alre-dedor de dos plantones de encina en Santa Cruz de Mudela Ciudad Real (Fotos Marisa Martiacutenez y Pedro Villar)

3 Proteccioacuten frente a herbiacutevoros

Los herbiacutevoros pueden dantildear y matar las plantas introducidas siendo las aves los ungulados y roe-dores los que maacutes dantildeo causan Las aves depredan baacutesicamente semillas mientras que los ungulados tanto silvestres como domeacutesticos se alimentan de plantas de cualquier edad Finalmente entre los roedores los ratones comen fundamentalmente se-millas y plaacutentulas en estadios de vida incipientes mientras que los conejos y liebres dantildean tanto a las plaacutentulas como los plantones de mayor edad Para reducir la depredacioacuten de las semillas aplicadas a voleo y favorecer su germinacioacuten conviene ente-rrar las semillas (Pentildeuelas et al 2002 Goacutemez 2004) La proteccioacuten de las plantas lentildeosas se puede lle-var a cabo bien por medio de vallas que encierran amplias zonas o bien protegiendo individualmen-te cada planta La proteccioacuten individual tambieacuten se puede practicar con las siembras puntuales Las vallas son uacutetiles para evitar los ungulados y si se entierran tambieacuten sirven para evitar a los conejos y liebres La proteccioacuten individual de cada planta se puede llevar a cabo con mallas y tubos protectores Las mallas pueden ser de plaacutestico y metaacutelicas (Figura

8) En la mayoriacutea de los casos deben ir sujetas con tutores y el borde inferior debe quedar ligeramente enterrado Los tubos protectores son de plaacutestico de entre 060 y 2 m de longitud con paredes continuas si bien cada vez se venden maacutes modelos con aguje-ros de ventilacioacuten Los tubos deben ser enterrados aproximadamente entre un cuarto y un tercio de su longitud y por ello los hacen muy uacutetiles para prote-ger siembras puntuales La principal diferencia con las mallas es que los tubos alteran significativamen-te el microclima alrededor de la planta La mayoriacutea de ellos reduce la radiacioacuten y la concentracioacuten de CO

2 e incrementa la temperatura y la humedad relati-

va del aire (Bergez y Dupraz 2000 Bellot et al 2002 Oliet y Jacobs 2007) Esta alteracioacuten del microclima aeacutereo de la planta puede tener efectos desiguales para el establecimiento de las especies En general para las especies lentildeosas pioneras de la sucesioacuten que son mayoritariamente helioacutefilas los tubos pro-tectores no incrementan la supervivencia e incluso la pueden reducir Plantas como el romero las jaras la retama o los pinos mediterraacuteneos no tienden a be-neficiarse de los tubos protectores En cambio para especies intermedias y tardiacuteas de la sucesioacuten que se reclutan en micrositios con una cierta sombra

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como la encina el madrontildeo o especies caducifolias los tubos protectores incrementan la supervivencia y el crecimiento (Oliet et al 2003 Pueacutertolas et al 2010) especialmente si los tubos tienen agujeros de ventilacioacuten (Figura 9) La ventilacioacuten reduce la

temperatura e incrementa la concentracioacuten de CO2

Los tubos protectores deben ser retirados cuando las plantas hayan superado ampliamente la longitud del tubo y se puedan mantener erguidas por siacute solas una vez retirado el tubo

VIII PREGUNTAS CLAVE

iquestNecesito introducir plantas lentildeosas para cumplir mis objetivos de revegetacioacuten

Es muy recomendable especialmente en ambientes mediterraacuteneos ya que aceleran la sucesioacuten secun-daria en muchos casos permiten una integracioacuten funcional y paisajiacutestica de la infraestructura lineal mejor que las herbaacuteceas y su mantenimiento si estaacuten bien seleccionadas es menor que en las her-baacuteceas

En caso de que se decida revegetar con lentildeosas iquestcuaacuteles son los principales limitantes para el desarrollo de los plantones en la obra y queacute medidas correctoras puedo tomar para reducirlas

El estreacutes hiacutedrico el friacuteo la baja fertilidad y la compactacioacuten del suelo la competencia con las especies herbaacuteceas o el dantildeo producido por los herbiacutevoros son los mayores problemas en el establecimiento de lentildeosas Las medidas dependeraacuten de las caracteriacutesticas ecoloacutegicas de las especies que se implanten pero en general usar plantas y semillas de calidad plantar en la eacutepoca adecuada y en micrositios de mayor disponibilidad de recursos en conjunto con la proteccioacuten contra los herbiacutevoros y la eliminacioacuten de las especies herbaacuteceas en los hoyos de plantacioacuten es suficiente para asegurar un buen nivel de eacutexito en la plantacioacuten

iquestQueacute criterios debo tener en cuenta a la hora de seleccionar las especies y los materiales de reproduccioacuten

La seleccioacuten de especies debe tener en cuenta que estas esteacuten adaptadas a los factores de estreacutes dominantes en la zona y debe incluir diversas es-pecies para incrementar la diversidad y resistencia a las perturbaciones de la zona restaurada Lo maacutes sencillo es escoger especies y materiales de reproduccioacuten que se desarrollen de forma natu-ral en las cercaniacuteas de la obra o en zonas con caracteriacutesticas climaacuteticas similares El material de

reproduccioacuten debe ser de calidad es decir con las caracteriacutesticas morfofisioloacutegicas adecuadas a la zona sin enfermedades ni deformaciones en las raiacuteces

iquestConviene regar o fertilizar

El riego no es estrictamente necesario si se han seleccionado las especies lentildeosas adecuadas la revegetacioacuten se hace en la eacutepoca debida el reacutegi-men de precipitaciones es normal y el material de reproduccioacuten es de buena calidad No obstante el riego se puede plantear en climas muy secos o en antildeos maacutes secos de lo normal En caso de tener suelos muy pobres se puede fertilizar pero siempre con dosis bajas La fertilizacioacuten depende-raacute de las caracteriacutesticas iniciales del sitio o de si existen sitios especialmente feacutertiles donde poda-mos plantar

iquestCoacutemo dispongo mis plantas en el espacio

Depende de si las especies seleccionadas son pioneras o maacutes tardiacuteas en la sucesioacuten y de su estrategia para resistir la sequiacutea Las primeras es-pecialmente si no tienen raiacuteces profundas se pue-den plantar en suelos maacutes pobres en nutrientes y en lugares que retengan menos humedad En cambio las especies maacutes tardiacuteas en la sucesioacuten y menos resistentes a la sequiacutea requieren lugares maacutes feacutertiles y huacutemedos como el pie del talud zonas llanas y menos expuestas a la insolacioacuten

iquestSon necesarias preparaciones del suelo

Son muy importantes cuando el suelo estaacute muy compactado de modo que dificulte el enraiza-miento y la infiltracioacuten del agua Las prepara-ciones someras son poco uacutetiles y lo miacutenimo que se debe realizar son ahoyados de 40 x 40 x 40 cm Dependiendo de la pendiente es preferible el uso de maquinaria ya que permite prepara-ciones maacutes intensas y el rendimiento de trabajo es mayor

A B

C D

Figura 8 Diferentes modelos de tubos protectores En la imagen (A) se muestra un tubo protector de 180 m sujeto con dos postes y protegido todo ello con malla metaacutelica Este sistema estaacute pensado para evitar los dantildeos causados por grandes herbiacutevoros Las imaacutegenes B y C muestran dos tipos de tubos protectores de O6 m agujereados para favorecer su ventilacioacuten La imagen D muestra una malla de plaacutestico usada frente a pequentildeos herbiacutevoros como conejos y liebres que afecta poco al microclima de la planta (Fotos Pedro Villar)

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X UN EJEMPLO DE EacuteXITO

iquestDoacutende

Almoguera (Guadalajara) sobre margas yesiacuteferas con una precipitacioacuten y temperatura media anual de 415 mm y 134 degC respectivamente

iquestQueacute se hizo

Se plantaron en enero plantones de Quercus ilex (encina) de una savia que se repartieron en tres tratamientos de proteccioacuten de la planta dos tipos de tubos protectores ventilado y sin ventilacioacuten y un control (sin tubo protector) El tubo protector usado fue regTubex-Press 065 de 60 cm de longi-tud y transluacutecido El tubo ventilado se consiguioacute practicando agujeros de 25 cm de diaacutemetro a dos niveles a 10 y 40 cm del borde superior A cada altura se hicieron cuatro agujeros La preparacioacuten del suelo consistioacute en subsolados a 60 cm de

IX ERRORES HABITUALES

Uso de especies y procedencias no adaptadas a las condiciones locales

Frecuentemente se usan las mismas especies nor-malmente las maacutes faacuteciles de conseguir por igual en todas las obras y dentro de una obra su distribu-cioacuten no sigue criterios con base ecoloacutegica Esto es un error muy grave ya que seleccionar especies y dentro de estas las procedencias mejor adaptadas a las condiciones ambientales locales es fundamental para el eacutexito de la revegetacioacuten (veacutease apartado II)

Meacutetodos y eacutepocas de revegetacioacuten inadecuados

No se debe usar como meacutetodo principal de revege-tacioacuten la siembra de plantas lentildeosas de semillas pe-quentildeas o de baja capacidad germinativa El uso de estaquillas se desaconseja en ambientes muy secos Por otro lado las obras de infraestructuras linea-les habitualmente tienen plazos de ejecucioacuten muy constrentildeidos en los que a menudo los trabajos de revegetacioacuten se ven abocados a realizarse en eacutepo-cas inadecuadas para el establecimiento de las plan-tas Cualesquiera que sean las especies empleadas plantar o sembrar en una eacutepoca inadecuada (muy cerca o durante el verano en mitad del invierno en estaciones muy friacuteas) conduce al fracaso La revege-tacioacuten debe hacerse en los periacuteodos huacutemedos del antildeo y no muy friacuteos (veacutease apartado III)

Mala calidad de planta

Las caracteriacutesticas morfoloacutegicas fisioloacutegi-cas y sanitarias de las plantas determinan su

capacidad de establecimiento El uso de plantas enfermas con una morfologiacutea inadecuada raiacute-ces deformadas poco fertilizadas y cultivadas en contenedores muy pequentildeos y con cepello-nes secos en el momento de la plantacioacuten es una garantiacutea de fracaso Los plantones deben estar morfoloacutegicamente bien proporcionados sanos y sin heridas y deben tener un cepe-lloacuten compacto y sin deformaciones en las raiacuteces para que no se desequen recalienten o se gol-peen durante su transporte y permanencia en la obra (veacutease apartado IV)

Malas (o ausencia de) preparaciones del suelo y condiciones edaacuteficas muy limitantes

La falta de preparaciones del suelo o bien prepa-raciones muy someras que no consigan reducir la compactacioacuten del suelo y aumenten el volumen efectivo de enraizamiento asiacute como la baja ferti-lidad edaacutefica son factores que limitan el estable-cimiento incluso de las especies maacutes resistentes (veacutease apartado VI)

Ausencia de cuidados posplantacioacuten

Al finalizar la plantacioacuten o la siembra se deben procurar una serie de cuidados encaminados a aportar recursos crear las condiciones y mini-mizar las interacciones negativas con otros or-ganismos hasta que la planta se establezca y pueda seguir desarrollaacutendose por siacute sola (veacutease apartado VII)

Figura 9 Influencia del tipo de tubo protector (sin tubo tubo sin ventilacioacuten y tubo ventilado) en la su-pervivencia de Quercus ilex (encina) al final del primer verano La figura estaacute hecha a partir de los datos de Nicolaacutes et al (1997)

70

60

50

40

30

20

10

0

Sin tubo protector Tubo protector sin ventilacioacuten Tubo protector con ventilacioacuten

Supe

rviv

enci

a (

)

profundidad y no se aplicoacute ninguacuten riego (Nicolaacutes et al 1997)

iquestQueacute ocurrioacute

Los tubos protectores especialmente los venti-lados aumentaron significativamente la supervi-vencia con respecto al control despueacutes del primer verano cuya supervivencia al comienzo del otontildeo fue tan solo del 5 Se atribuye la elevada su-pervivencia (~60) de las encinas en los tubos ventilados con respecto al control (Figura 9) por-que redujeron la radiacioacuten un factor que cuando se da en combinacioacuten con estreacutes hiacutedrico causa la fotoinhibicioacuten de los fotosistemas de la planta reduciendo en consecuencia su capacidad foto-sinteacutetica Ademaacutes el microclima dentro del tubo ventilado fue menos desecante que el del tubo sin ventilacioacuten

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Ecotecnologiacutea aplicada a la restauracioacuten de infraestructuras de transporte

Santiago Soliveres Valentiacuten Contreras Joatildeo Paulo Fernandes Jordi Cortina Pablo Garciacutea-Palacios Marisa Martiacutenez y Jorge Fort

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IacuteNDICE

CAPIacuteTULO 7 Ecotecnologiacutea aplicada a la restauracioacuten de infraestructuras de transporte

Santiago Soliveres Valentiacuten Contreras Joatildeo Paulo Fernandes Jordi Cortina Pablo Garciacutea-Palacios Marisa Martiacutenez y Jorge Fort

I INTRODUCCIOacuteN Y OBJETIVOS

La ecotecnologiacutea1 es un concepto surgido a princi-pios de la deacutecada de los sesenta La definicioacuten de este teacutermino ha generado mucha discusioacuten en la lite-ratura cientiacutefica debido principalmente a la amplitud de campos donde estas teacutecnicas pueden aplicarse Entre las definiciones maacutes aceptadas y aplicables al contexto de la restauracioacuten de infraestructuras li-neales estaacute la que define ecotecnologiacutea como la aplicacioacuten de principios pertenecientes a la ingenie-riacutea (disentildeo monitorizacioacuten y construccioacuten) para de-sarrollar nuevas teacutecnicas usando normalmente como base material vegetal que permitan acelerar la res-tauracioacuten ecoloacutegica y paisajiacutestica de aacutereas gravemen-te degradadas Pese a ser un concepto relativamente nuevo el uso de materiales vegetales para reducir la erosioacuten en ingenieriacutea civil viene practicaacutendose des-de antiguo las primeras referencias del uso de este tipo de materiales en China datan desde hace maacutes de 2000 antildeos siendo ya ampliamente utilizadas en Europa desde el siglo xvi (Lewis 1999) El uso de estas tecnologiacuteas es recomendable cuando los procesos naturales o el manejo de estos no son su-ficientes para asegurar la estabilizacioacuten y posterior restauracioacuten de las obras Otras partes del presente libro definen cuaacuteles son los procesos naturales que intervienen en la colonizacioacuten vegetal y coacutemo pode-mos ayudar a acelerarlos (Capiacutetulos 5 y 6) por lo que en este capiacutetulo nos centraremos en la discusioacuten

1 En este capiacutetulo nos referiremos a ecotecnologiacutea como sinoacutenimo de bioingenieriacutea Una discusioacuten maacutes detallada de estos conceptos estaacute maacutes allaacute del aacutembito de este manual

de las medidas ecotecnoloacutegicas aplicadas maacutes co-muacutenmente cuando estos procesos estaacuten limitados

Las medidas ecotecnoloacutegicas disponibles son nume-rosas y variadas pero las empleadas en taludes de obras de infraestructuras lineales presentan cinco objetivos fundamentales a) restituir la capacidad de los taludes para retener el agua y el suelo b) inte-grarlos visualmente c) facilitar la colonizacioacuten y es-tablecimiento de la vegetacioacuten d) reducir los costes de mantenimiento y e) aumentar la seguridad vial En este capiacutetulo hemos organizado estas teacutecnicas en funcioacuten de los procesos geoecoloacutegicos sobre los que actuacutean englobaacutendolas en cuatro grandes grupos

bull Teacutecnicas destinadas a evitar la erosioacuten donde es im-posible establecer una cubierta vegetal suficiente

bull Teacutecnicas destinadas a incrementar la fertilidad del suelo para fomentar una mayor cobertura y produccioacuten vegetal

bull Teacutecnicas para facilitar la llegada y establecimiento de nuevas especies normalmente herbaacuteceas alliacute donde la colonizacioacuten natural se ve dificultada

bull Teacutecnicas destinadas a la introduccioacuten y estable-cimiento de especies de aacuterboles y arbustos para acelerar la sucesioacuten secundaria reduciendo asiacute los costes de mantenimiento de los taludes

La utilizacioacuten de plantas y de vegetacioacuten como mate-rial de construccioacuten presenta ventajas pero tambieacuten limitaciones que interesa tener siempre presentes (Tabla 1)

Tabla 1 Ventajas e inconvenientes de las plantas y de los materiales inertes como materiales de construccioacuten

UTILIZACIOacuteN DE LA VEGETACIOacuteN COMO MATERIAL DE CONSTRUCCIOacuteN

UTILIZACIOacuteN DE MATERIALES INERTES COMO MATERIAL DE CONSTRUCCIOacuteN

VENTAJAS DESVENTAJAS VENTAJAS DESVENTAJAS

Normalmente no estaacute afectada por procesos de degradacioacuten Pueden proporcionar una estabilizacioacuten creciente y presentar una capacidad regenerativa intriacutenseca

Cumple su funcioacuten protectora de un modo elaacutestico absorbiendo los elementos y acciones lsquoagresivasrsquo disminuyendo o anulando su intensidad

Ayuda a restituir funciones bioloacutegicas y ecoloacutegicas

Tiene una mayor integracioacuten esteacutetica y paisajiacutestica

No cumple en todas las situaciones las exigencias de consolidacioacuten y seguridad requeridas

Es maacutes sensible a las condiciones ambientales del sitio y sus variaciones temporales

Solo alcanza su plena eficiencia teacutecnica tras un cierto intervalo de tiempo

Son maacutes estables

Son maacutes independientes de las caracteriacutesticas del sitio y su aplicacioacuten no estaacute limitada temporalmente

Funcionan mejor a corto plazo

No poseen capacidad de autorregeneracioacuten por lo que tienden a perder su eficiencia a largo plazo

Funcionan como estructuras constructivas riacutegidas o muy poco deformables frente a las condiciones ambientales

Constituyen normalmente elementos extrantildeos en el paisaje

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IacuteNDICE

Estas teacutecnicas consisten en la aplicacioacuten de sistemas vegetativos combinados o no con otros materiales o sistemas constructivos dirigida a consolidar zonas inestables recuperar aacutereas degradadas y encuadrar otras intervenciones constructivas Nunca estaacute de maacutes enfatizar que el objetivo de la ecotecnologiacutea no son las teacutecnicas y materiales constructivos com-plementarios sino la instalacioacuten eficaz de la vege-tacioacuten y que por tanto en las ocasiones donde la instalacioacuten de vegetacioacuten pueda darse sin ayuda de estas teacutecnicas en el tiempo y forma adecuados es-tas no seraacuten necesarias (Figura 1) Por ejemplo las mantas orgaacutenicas o los muros de gaviones deben ser considerados como apoyos transitorios hacia la plena instalacioacuten de la vegetacioacuten con excepcioacuten de

las situaciones en que expliacutecitamente la naturaleza del factor de riesgo o del problema que se propone resolver impliquen la necesidad de una estructura inerte que complemente a largo plazo la accioacuten de la vegetacioacuten cuando esta sea incapaz de asegurar las condiciones de seguridad exigidas Por tanto en las condiciones en que no sea necesaria esta estructura de apoyo y la vegetacioacuten se pueda instalar por siacute sola esta teacutecnica no seriacutea necesaria

El objetivo principal de este capiacutetulo es familiarizar a los lectores con las principales medidas ecotec-noloacutegicas disponibles describir su funcionamiento y modo de aplicacioacuten e identificar las condiciones oacuteptimas para su aplicacioacuten

Figura 1 Aacuterbol de criterios generales que debe seguir un proceso de toma de decisiones para la restauracioacuten de una infraestructura lineal dependiendo de los casos particulares a los que nos enfrentemos Las diferentes medidas se detallan maacutes adelante en este capiacutetulo

Antes de la obra 1 Minimizar afeccioacuten de la obra

- Dejar aacutereas cercanas a la obra con vegetacioacuten natural intacta

- Dejar tanto como sea posible franjas de vegetacioacuten en los bordes del talud

- Procurar que la obra tenga impacto sobre la menor superficie posible

- Reducir las pendientes de los taludes tanto como sea posible

2 iquestEstablecimiento vegetal posible de forma natural

3 iquestEs posible asegurar el establecimiento vegetal mediante topsolling

4 Condiciones ambientales retrasan colonizacioacuten vegetal

Aplicar topsolling

No intervenir

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SIacute

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NO

NO

NO

Aplicar medidas ecotecnoloacutegicas

5 Condiciones ambientales imposibilitan colonizacioacuten vegetal (elevadas pendientes sustrato de roca viva)

Geomallas muros gaviones

a) baja fertilidad del suelo

b) fuentes de semillas lejanas

c) elevado peligro de erosioacuten

hidrosiembra con especies locales plantacioacuten de lentildeosas

geosinteacuteticos fajinas mantas orgaacutenicas (dependeraacute del caso)

fertilizar (orgaacutenicoinorgaacutenico) mantas orgaacutenicasSIacute

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II TEacuteCNICAS DESTINADAS A EVITAR PROCESOS EROSIVOS

Durante la ejecucioacuten de la obra y antes de la aplicacioacuten de estas teacutecnicas deberaacuten tenerse en cuenta aquellas medidas anteriormente apunta-das para minimizar el impacto de la obra sobre la vegetacioacuten y la resistencia del talud a la ero-sioacuten Esto es reducir al maacuteximo las pendientes de los taludes y la destruccioacuten de la vegetacioacuten circundante Pero en muchas ocasiones y a pesar de estos esfuerzos las caracteriacutesticas de deter-minados taludes (pendientes muy pronunciadas estructura rocosa etc) hacen necesario aplicar teacutecnicas especiales para evitar procesos erosivos y problemas de estabilidad Esto facilita a su vez la integracioacuten del talud en el entorno y la colonizacioacuten vegetal con ciertas garantiacuteas de eacutexi-to Son muchas las teacutecnicas disponibles para el control de la erosioacuten pudiendo utilizarse por siacute solas o en combinacioacuten con la introduccioacuten de especies herbaacuteceas y lentildeosas (pe tierra arma-da) o junto con otras teacutecnicas ecotecnoloacutegicas para incrementar el eacutexito de la restauracioacuten (pe muros verdes) Cabe destacar la necesidad de di-ferenciar los conceptos de estabilizacioacuten de talu-des y proteccioacuten frente la erosioacuten superficial La mayoriacutea de sistemas que se describiraacuten en este capiacutetulo son aptos para mitigar procesos erosivos que generen un problema de estabilidad pero siempre deben ser utilizados en taludes construc-tivamente estables A continuacioacuten se presentan las medidas maacutes utilizadas con recomendaciones especiacuteficas sobre su aplicacioacuten Antes de leer so-bre estas medidas referimos al lector al Capiacutetulo 2 de este manual donde se detallan algunas con-sideraciones geomorfoloacutegicas que atantildeen al uso de estas teacutecnicas

1 Mallas o enrejados metaacutelicos

Son estructuras metaacutelicas de alta resistencia a la rotura Se utilizan para evitar la caiacuteda de piedras sobre la calzada Solo son recomendables cuando se pretende detener la erosioacuten de bolos o elemen-tos gruesos del talud pero no son uacutetiles para re-tener los finos Para retener estos se recomienda combinar mallas metaacutelicas geomallas tridimensio-nales y mantas o redes orgaacutenicas (explicadas maacutes adelante) como soporte de trepadoras y de elemen-tos naturales que colonicen el talud Esta teacutecnica mixta estaacute dando buenos resultados mejorando el establecimiento vegetal y la integracioacuten paisajiacutestica (Figura 2)

Figura 2 Manta orgaacutenica combinada con un enrejado metaacutelico en un talud del polideportivo de Alhama Granada

2 Sistemas tridimensionales geomallas volumeacutetricas

La geomalla volumeacutetrica es un sistema tridimen-sional formado por distintas mallas termosoldadas con componentes tratados para resistir radiaciones ultravioleta y que conserva sus caracteriacutesticas me-caacutenicas durante no menos de siete antildeos Permiten trabajar con pendientes de maacutes de 40deg y son muy eficaces en el control de erosioacuten gracias a la reten-cioacuten de finos

Las mallas volumeacutetricas se utilizan en taludes sobre todo de desmonte donde no se pueda rea-lizar una aportacioacuten de tierra vegetal adecuada para crear suelo en taludes con material pedre-goso abundante terrenos margosos bocas de tuacuteneles etc Tambieacuten son muy utilizadas en tra-tamientos de sistemas fluviales encauzamiento de barrancos proteccioacuten de cauces con riesgo de avenidas en combinacioacuten con otros tratamientos

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de bioingenieriacutea como los lechos de ramaje vivo biorrollos estaquillados etc Poseen altas prestaciones a unas condiciones hidraacuteulicas de-terminadas y calculadas despueacutes de realizar las distintas comprobaciones de estabilidad estaacutetica rugosidad hidraacuteulica y estabilidad dinaacutemica del sistema El espesor miacutenimo que deben tener es-tas mallas es de 20 mm y la apertura de malla miacutenima debe ser le10 mm Sobre estas mallas se realiza una proyeccioacuten de sustrato posterior com-puesta habitualmente por turba fibra de coco fibra de madera estabilizante fertilizantes orgaacute-nicos y semillas de plantas adaptadas a las con-diciones del sitio Esta proyeccioacuten permite crear un lecho de siembra adecuado en taludes con ausencia de tierra vegetal permitiendo la germi-nacioacuten y desarrollo de las plantas en el periodo maacutes criacutetico de establecimiento favoreciendo el desarrollo del sistema radicular en el interior del talud y creando un entramado integral de raiacuteces-suelo-geomalla que muestra una elevada resis-tencia a la traccioacuten

Son sistemas ideados para permanecer en el tiempo sin variar sus caracteriacutesticas mecaacutenicas donde la re-vegetacioacuten y regeneracioacuten se va a establecer a largo plazo Son particularmente interesantes en aquellas situaciones en las que otros tipos de sistemas orgaacute-nicos no funcionan debido a que se degradan y pier-den sus propiedades Este sistema es muy utilizado en sistemas combinados para la estabilizacioacuten de taludes conjuntamente con mallas de triple torsioacuten redes de cable etc

3 Sistemas de confinamiento celular geoceldas

Sistema de confinamiento celular estructurado por tiras de polietileno de alta densidad texturi-zadas y perforadas para aumentar la rugosidad y facilitar el drenaje termosoldadas a una distan-cia determinada para la formacioacuten de alveacuteolos Su estructura en forma de acordeoacuten bidimensio-nal una vez abierta forma un sistema alveolar que permite retener distintos tipos de materia-les Este sistema puede albergar espesores de tierra vegetal de entre 5 y 20 cm dependiendo de la anchura de las cintas permitiendo realizar plantaciones y siembras en su seno Su principal inconveniente es que solo se puede emplear en

pendientes de hasta 35deg ya que su relleno va a estar supeditado a la cohesioacuten y al aacutengulo de rozamiento interno del suelo Este tratamiento suele ser inviable en desmontes debido a las pendientes acusadas que suelen presentar Por el contrario es muy utilizado en canalizaciones y encauzamiento de barrancos donde las pendien-tes no suelen superar los 30deg

4 Mantas orgaacutenicas

Son productos relacionados con los geotextiles y estaacuten compuestos por mallas y fibras naturales (pe fibra de coco yute paja esparto) o sinteacuteticas (pe polipropileno) Se emplean para aplicaciones geoteacutecnicas de control de la erosioacuten y de mejora de las condiciones del suelo Su composicioacuten (muy variable seguacuten el tipo y disposicioacuten de las mallas y fibras utilizadas) condicionaraacute su potencialidad y las teacutecnicas de aplicacioacuten Sirven para frenar la erosioacuten laminar sobre taludes rellenar regueros como revestimiento de muros soporte de trepa-doras etc Estas mallas favorecen la formacioacuten de suelo mediante la retencioacuten de finos en escorren-tiacuteas y el aporte de materia orgaacutenica al suelo tras su descomposicioacuten Tienen la ventaja de controlar la evaporacioacuten regulando la temperatura y aumen-tando la infiltracioacuten de agua de lluvia en el suelo de manera que mejora las condiciones de humedad en zonas de xericidad acusada Se emplean para dar coherencia a las partiacuteculas de suelo fijando a su vez la vegetacioacuten espontaacutenea o hidrosem-brada sobre el mismo Pueden ser prescritas para situaciones muy diversas de erosioacuten laminar alta cunetas y caacutercavas restauracioacuten de maacutergenes de riacuteos o taludes con pendientes de entre 25-45deg Las mantas orgaacutenicas deben ser permeables a los ele-mentos finos del suelo y a la recepcioacuten de semillas tanto aportada artificialmente como la dispersada de manera natural (Figura 3) En el caso de que tengamos suelos de granulometriacutea gruesa o vegeta-cioacuten ya establecida se recomiendan mallas o redes orgaacutenicas yo sinteacuteticas Dada la adaptabilidad de la manta a las irregularidades del terreno se puede forrar el contorno de las caacutercavas y barranqueras y con el apoyo de encadenados de piedra o fajinados vegetales (lsquoplantas vivasrsquo) o artificiales (biorrollos) para dar solucioacuten a restauraciones de cabeceras de cuenca y encauzamientos de gran aplicacioacuten en el control de avenidas

Figura 3 Red orgaacutenica de fibra de coco instalada un tramo de AVE en Humilladero (Maacutelaga) Obseacutervese coacutemo la manta permite la ger-minacioacuten de las especies herbaacuteceas

Es fundamental elegir el tipo de manta adecuado pues a los limitantes comentados anteriormente se debe antildeadir el riesgo de que se degrade con excesiva rapidez arrastrando los soacutelidos acumu-lados y la vegetacioacuten existente Si estas mantas se refuerzan con mallas sinteacuteticas de gran du-racioacuten se pueden utilizar incluso sobre taludes muy verticales situaciones donde hasta ahora no se interveniacutea en prevencioacuten de la erosioacuten eoacutelica e hiacutedrica

5 Mallas o redes orgaacutenicas yo sinteacuteticas

Son al igual que las mantas orgaacutenicas productos relacionados con los geotextiles de composicioacuten de fibras similares (coco yute o polipropileno) pero que por definicioacuten sus elementos constituti-vos (hilos) son porcentualmente menores que sus huecos por lo que se emplean como elementos de refuerzo en aplicaciones geoteacutecnicas y de res-tauracioacuten de la vegetacioacuten ya que entre la luz de malla se originaraacuten pequentildeos diques de conten-cioacuten de las microcaacutercavas del talud que facilitaraacuten el paso de vegetacioacuten nacida Son por ello un recurso diferente de las mantas orgaacutenicas al ser especialmente indicadas para el refuerzo de otros productos geoteacutecnicos o de terrenos de granu-lometriacutea gruesa que quedaraacuten en parte retenidos entre sus huecos facilitando a la vez el paso de

la vegetacioacuten nacida o sembrada sobre eacutel mejo-rando de esta manera la implantacioacuten vegetal En particular las redes orgaacutenicas de coco tienen una gran adaptabilidad y flexibilidad generando bue-nos resultados en desmontes de margas arcillas etc poco pedregosos Como todos los soportes estas redes pueden ser instaladas fuera de eacutepocas de siembra de forma que se inicie la proteccioacuten superficial de los taludes antes del establecimien-to vegetal

6 Estabilizacioacuten y revegetacioacuten de taludes mediante sistemas flexibles

Se trata de una combinacioacuten de las teacutecnicas an-teriormente descritas geomallas tridimensionales mantas o redes con mallas de triple torsioacuten red de cable cable de refuerzo y bulones Esta com-binacioacuten se emplea cuando una teacutecnica individual no es capaz de solucionar todos los problemas de erosioacuten y estabilizacioacuten por siacute misma Gracias a sus caracteriacutesticas permite reunir las condicio-nes adecuadas para una posterior revegetacioacuten e integracioacuten visual del talud sustituyendo teacutecnicas maacutes agresivas como muros escolleras o gunita-dos

7 Muros de pie

Son elementos estructurales de la obra necesarios para lograr la estabilidad de los taludes Permiten disminuir la pendiente de los taludes hasta alcan-zar el equilibrio estaacutetico disminuyendo la veloci-dad de escorrentiacutea del agua de lluvia y facilitando la restauracioacuten vegetal Estos muros pueden ser ejecutados a base de gaviones metaacutelicos de mam-posteriacutea de escolleras de tierra reforzada (muros verdes) o de estructuras de madera Requieren un caacutelculo estructural previo Se pueden emplear en taludes muy verticales o que presenten alguacuten pro-blema de estabilidad o de falta de espacio para su ejecucioacuten (Figura 4) Presentan la ventaja de que al disminuir la altura de caiacuteda libre de las tierras pueden servir de soporte de estas presentando mejores posibilidades de revegetacioacuten y estabi-lizacioacuten del talud Es conveniente utilizarlos en combinacioacuten con geotextiles o mantas orgaacutenicas para evitar la peacuterdida de suelo a traveacutes del muro y facilitar el drenaje

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Figura 4 Muro vegetal de acondicionamiento de acceso a Fornes Granada

8 Fajinas o fajinados

Pueden ser prefabricados industriales a base de fi-bras naturales constituyendo lo que se han venido a llamar biorrollos Pero tambieacuten pueden ser fabrica-dos in situ de forma tradicional a base de manojos de ramas o tallos atados en forma de huso que se colocan sobre bermas o zanjas poco profundas Los biorrollos son estructuras prefabricadas de forma industrial perfectamente ciliacutendricas Se elaboran a base de fibras generalmente naturales (coco espar-to o paja) envueltas en mallas o redes de coco o de polipropileno Tienen la ventaja de su maleabilidad que les permite adaptarse a las irregularidades del terreno como caacutercavas Tienen una elevada capaci-dad para retener finos y semillas arrastradas y faci-lidad de suministro e instalacioacuten

Respecto a las fajinas elaboradas en el tajo median-te materiales locales las fajinas comerciales evitan la necesidad de desbroce o poda y el tiempo y es-fuerzo dedicados a ello Las fajinas de madera o ramas se han usado desde antiguo para el control de la erosioacuten Para ello se suelen emplear tallos de ramas lentildeosas con gran capacidad de enraizamiento que deben ser flexibles largas rectas y con yemas de crecimiento activas que se disponen paralelas al perfil del talud y se entierran someramente (veacuteanse imaacutegenes de ejemplo en httpwwwwsdotwagov Mataix 2003) El uso de estas fajinas vivas solo tie-ne sentido en lugares donde la humedad del suelo permite el enraizamiento En situaciones de sequiacutea o escasa disponibilidad de material se pueden em-plear restos de poda de aacuterboles cercanos (Soliveres et al 2008)

Este tratamiento da buenos resultados a medio-largo plazo siendo necesaria la aplicacioacuten de otras teacutecni-cas (hidrosiembras mantas orgaacutenicas etc) para re-ducir la erosioacuten a maacutes corto plazo al objeto de com-pletar el tratamiento recubriendo el espacio existente entre fajinas Estas estructuras estaacuten disentildeadas para controlar la erosioacuten derivada del flujo laminar de agua en cauces y reducir la escorrentiacutea superficial en taludes soportando velocidades de agua superiores a 15 ms-1 Esta teacutecnica ha sido recomendada para la creacioacuten de franjas donde implantar vegetacioacuten en las orillas de cauces de riacuteos crear lsquobioislasrsquo y reve-getar zonas pantanosas (Lewis 1999) Su colocacioacuten a lo largo de la orilla es raacutepida y sencilla fijaacutendose habitualmente mediante estacas de madera Las fa-jinas ademaacutes contribuyen a mejorar el eacutexito de las plantaciones de lentildeosas en taludes de pendientes de menos de 35deg ya que a) fraccionan los taludes (ha-bitualmente cada 8 o 15 m) de manera que atenuacutean los problemas de arrastre y escorrentiacuteas fuertes b) actuacutean como drenajes intermedios reduciendo la for-macioacuten de regueros y caacutercavas y c) crean un micro-clima benigno para el crecimiento de la vegetacioacuten (Ludwig y Tongway 1996 Tongway y Ludwig 1996 Mataix 2003)

9 Lechos y entramados de ramas colchones de vegetacioacuten

Son estructuras que pueden ser tambieacuten fabrica-das in situ o industrialmente para colocarlas sobre lechos de cauces de riacuteos y arroyos Casi siempre se situacutean por encima de las fajinas y unidas a es-tas forman un conjunto entramado y cosido hasta formar un lecho naturalizado y estabilizado por la vegetacioacuten Para la confeccioacuten de los lechos y en-tramados de ramas es necesaria una gran cantidad de material vegetal seleccionado preferentemente vivo (en verde) que puede resultar de los trabajos de desbroce o limpieza de los cauces valorizando con ello la biomasa forestal Estas estructuras de ramas actuariacutean como un mulch evitando la erosioacuten laminar y la formacioacuten de regueros Estas estructuras ganan estabilidad si se logra el enraizamiento para lo cual es necesario que el material vegetal a) se conserve fresco b) esteacute en condiciones fenoloacutegicas favorables c) pueda cubrirse al menos parcialmen-te con tierra y d) el suelo tenga un nivel de hume-dad adecuado

Los colchones prefabricados industrialmente al igual que los biorrollos estaacuten constituidos por una malla natural o sinteacutetica generalmente de coco o polipro-pileno rellena de fibras de coco esparto o paja para

formar una estructura plana de no maacutes de 10 cm de espesor Dispuesta sobre las maacutergenes de los cauces o cosida a los biorrollos es capaz de retener la ero-sioacuten laminar o en regueros capturando finos y semi-llas y permitiendo el crecimiento vegetal hasta gene-rar un conjunto estable Estos colchones puede ser precultivados en vivero con las especies adecuadas mejorando con ello su capacidad de estabilizar de forma inmediata estas maacutergenes evitando los riesgos de arrastres por falta de implantacioacuten vegetal

10 Encachados

Son estructuras muy resistentes a las fuerzas tanto internas como externas recurrentes sobre el terre-no que se construyen al objeto de dar seguridad a los taludes y a las maacutergenes de los cauces resul-tantes de la obra Se suelen instalar sobre puntos singulares que requieren especial atencioacuten como estribos puentes pasos superiores o inferiores etc Se pueden realizar a base de mamposteriacutea trabada escolleras piezas prefabricadas en hormigoacuten y cada vez con mayor frecuencia gaviones o colchones de revestimiento ya sean riacutegidos o flexibles (Figura 5) Estos uacuteltimos los gaviones de revestimiento tienen la ventaja de presentar mayor elasticidad estructural

y su permeabilidad a la vegetacioacuten con lo que su integracioacuten paisajiacutestica es siempre posible Ademaacutes si son flexibles seraacuten especialmente recomendables en situaciones en que las tensiones de empuje y arrastre de los cauces en las entradas o salidas de las obras de faacutebrica provoquen el socavamiento ro-tura y arrastre de las estructuras maacutes riacutegidas

Figura 5 Gavionado flexible como refuerzo de la salida de un paso inferior Jabalquinto Jaeacuten

III TEacuteCNICAS DESTINADAS A INCREMENTAR LA FERTILIDAD DEL SUELO

Con frecuencia los taludes de las infraestructuras via-les son poco feacutertiles hasta el punto de que su escasa fertilidad puede dificultar la colonizacioacuten vegetal natu-ral o promovida a traveacutes de hidrosiembras y plantacio-nes Por ello el incremento de la fertilidad del suelo mediante enmiendas orgaacutenicas y fertilizantes inorgaacuteni-cos es recomendable (Valdecantos et al 2004)

1 Fertilizantes inorgaacutenicos

Los fertilizantes inorgaacutenicos utilizados maacutes frecuen-temente son de liberacioacuten lenta Estos fertilizantes son sencillos de aplicar aportan las dosis necesarias de nitroacutegeno foacutesforo y potasio nutrientes particu-larmente importantes para el desarrollo vegetal y normalmente implican el aporte de cantidades ni-mias de elementos que pudieran ser perjudiciales o contaminantes Estos fertilizantes sin embargo son faacutecilmente lavables por lo que deberiacutean ser incorpo-rados en el sustrato para facilitar su acceso y evitar la exportacioacuten por escorrentiacutea y viento evitando asiacute

su desplazamiento antes de que se produzca el esta-blecimiento y crecimiento de las especies herbaacuteceas o lentildeosas Teniendo en cuenta sus resultados y la elevada disponibilidad de enmiendas orgaacutenicas los fertilizantes inorgaacutenicos suelen emplearse exclusiva-mente como complemento a otras teacutecnicas como las hidrosiembras

2 Enmiendas orgaacutenicas

Las enmiendas orgaacutenicas tienen la ventaja de que ademaacutes de aportar nutrientes baacutesicos para las plan-tas incrementan la cantidad de materia orgaacutenica del suelo y con ello mejoran otras propiedades fiacutesico-quiacutemicas del sustrato Suelen incrementar la capacidad de retencioacuten de agua del suelo de parti-cular importancia en medios mediterraacuteneos aunque esto dependeraacute del tipo de enmienda orgaacutenica y el clima donde se aplica pudiendo llegar a darse el efecto contrario (Fuentes et al 2007) Otra venta-ja del uso de estas enmiendas es que permite la

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reutilizacioacuten de restos orgaacutenicos (residuos soacutelidos urbanos residuos procedentes de ganaderiacutea y lodos de depuradora Cortina y Vallejo 2004) Finalmen-te la incorporacioacuten de compuestos orgaacutenicos podriacutea contribuir a mejorar los resultados de otras interven-ciones ecotecnoloacutegicas como las mantas orgaacutenicas y las hidrosiembras (Fuentes et al 2002 veacutease tam-bieacuten un ejemplo de eacutexito en la descripcioacuten de las teacutecnicas de introduccioacuten de herbaacuteceas) De forma ideal las enmiendas orgaacutenicas deben ser mezcla-das con la capa maacutes superficial (aproximadamente los primeros 50 cm) del sustrato original de esta

forma evitaremos problemas de erosioacuten y de peacuterdida o lavado de la enmienda aportada reduciendo el contacto entre la planta y la enmienda

Antes de fertilizar debemos tener en cuenta que idealmente el porcentaje de materia orgaacutenica del sustrato deberiacutea estar cercano al 15 y la salinidad nunca deberiacutea superar los 4 ds m-1 Las Tablas 2 y 3 explican en detalle queacute variables y anaacutelisis de suelo deberiacuteamos considerar y queacute rangos de valores de-beremos tolerar a la hora de decidir si el suelo es uacutetil y si debemos corregir su fertilidad

Tabla 2 Propiedades fiacutesico-quiacutemicas cuyo control es recomendable para definir la calidad de un sustrato Se indican meacutetodos analiacuteticos para su determinacioacuten

VARIABLE GRADO DE IMPORTANCIA MEacuteTODO ANALIacuteTICO

Contenido de humedad

Granulometriacutea

Elementos gruesos

Textura (lt2 mm)

Densidad aparente

pH

Salinidad

Carbonatos

Materia orgaacutenica

Nitroacutegeno total

Foacutesforo asimilable

Potasio asimilable

Metales pesados

++

++

++

++

++

++

++

+

+

+

++()

Tamizado

Tamizado y sedimentacioacuten

Cubicajea

Suspensioacuten acuosa 125

CE extracto en pasta saturada

Calciacutemetro Bernard

Walkley amp Black

Kjeldahl

Olsen

Extraccioacuten en acetato amoacutenico

Tratamiento aacutecido

Los signos positivos (+) indican grado de importancia de cada indicador de calidad + aconsejable ++ necesario +++ imprescindible () uacutenicamente importante en enmiendas orgaacutenicas o tierras de procedencia desconocida a Es necesario medirlo en grandes voluacutemenes CE conductividad eleacutectrica Modificado de Jorba y Vallejo 2008

Tabla 3 Niveles recomendados de diversas propiedades fiacutesico-quiacutemicas de los substratos aptos para la restauracioacuten y liacutemites legales para su aplicacioacuten

SUELO COMPOST FANGOS EDAR

MIacuteNIMO MAacuteXIMO

Granulometriacutea ()

250-75 mm - 25 - -

75-2 mm - 75 - -

lt2 mm 20 - - -

lt0002 mm 5 - - -

Textura Clases francas - -

Densidad aparente (Tasm3) - 18 06-08 (d) 1 (d)

Carbonatos totales () - 60 -- -

pH (125) 55 87 - 55-9

MO 08 - 10 gt35 lt80

Grado de estabilidad MO ( MO seca)

- - gt35 (d) gt30 (d)

Nitroacutegeno total () 005 03 - -

Foacutesforo asimilable (mgkg) 10 50 - -

Potasio asimilable (mgkg) 50 - - -

Salinidad CE (dSm a 25 ordmC) - 4 - -

Humedad () - - 30-40 lt80

CN - - lt20 -

Cadmio (mgkg) - 15 3 10 40

Cobre (mgkg) - 100 400 1000 1750

Niacutequel (mgkg) - 70 100 300 400

Plomo (mgkg) - 100 200 750 1200

Zinc (mgkg) - 200 1000 2500 4000

Mercurio (mgkg) - 1 25 10 25

Cromo (mgkg) - 100 300 1000 1500

Modificado de Valdecantos et al 2004 Jorba y Vallejo 2008 CE conductividad eleacutectrica MO materia orgaacutenica

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Sin embargo las enmiendas orgaacutenicas presentan al-gunos problemas

bull La maquinaria normalmente utilizada para mez-clar estas enmiendas orgaacutenicas con el suelo no permite trabajar en pendientes elevadas hacien-do imposible trabajar en taludes con pendientes muy elevadas aunque esto dependeraacute del ran-go de actuacioacuten de la maquinaria disponible No obstante existe la posibilidad de mezclarlas en pilas junto con el sustrato antes del esparcimien-to de este por el talud o bien aplicarlas mediante hidrosembradora directamente sobre la superficie del talud De esta forma aumentaremos el rango de pendientes en el que estas enmiendas orgaacuteni-cas seriacutean aplicables

bull Pueden aumentar la salinidad del suelo en cli-mas secos originando problemas de toxicidad y reduciendo asiacute el crecimiento vegetal Este factor es particularmente relevante en medios medite-rraacuteneos en los que la sequiacutea estival intensifica el efecto de las sales Para evitar estos problemas se recomienda una dosis media de aproximada-mente 4 kg de enmienda orgaacutenica por m2 (Fuen-tes et al en prensa) si bien esta dosis maacutexima dependeraacute de la fertilidad del sustrato las condi-ciones climaacuteticas y el tipo de enmienda orgaacutenica utilizada A continuacioacuten se resumen los caacutelculos para estimar la cantidad de enmienda necesaria para llevar el suelo a un contenido de materia orgaacutenica de aproximadamente 15 (valor reco-mendado)

Si X = peso de compost respecto al total () A = concentracioacuten de materia orgaacutenica del subs-trato original () y Bm = concentracioacuten de ma-teria orgaacutenica de la enmienda orgaacutenica ( veacutea-se Tabla 3)

[A times (X - 100)] + [B times X] = 15

bull Debemos tener muy en consideracioacuten los conte-nidos en metales pesados de estas enmiendas ya que en muchas ocasiones las elevadas con-centraciones de zinc (Zn) cobre (Cu) y cadmio (Cd) pueden originar problemas graves de con-taminacioacuten y toxicidad del suelo (Tabla 3)Tam-bieacuten deberemos asegurarnos de que la enmien-da que apliquemos cumpla la legalidad vigente en cuanto a otras variables importantes como contenido de contaminantes orgaacutenicos y micro-organismos patoacutegenos

3 La aplicacioacuten de fertilizantes de forma heterogeacutenea es maacutes recomendable que hacerlo de forma homogeacutenea en todo el talud

Las especies vegetales difieren en sus estrategias ecoloacutegicas Esto es hay especies adaptadas a crecer en sustratos poco feacutertiles pero que no toleran la competencia con otras especies y otras que nece-sitan sustratos maacutes feacutertiles pero que gracias a sus mayores tasas de crecimiento o a su mayor habilidad para capturar los recursos disponibles son superio-res competitivamente pudiendo desplazar a otras especies en ambientes favorables El incremento de la fertilidad del suelo siempre va a favorecer a las especies competitivas En el caso de que sea el objetivo de la restauracioacuten el asegurar una maacutexima biomasa y cobertura vegetal fertilizar de forma ho-mogeacutenea seraacute la estrategia maacutes recomendable Sin embargo en ocasiones es deseable conseguir co-munidades vegetales diversas Para conseguir este objetivo debemos promover la estructura heterogeacute-nea de los ecosistemas naturales donde zonas con un elevado nivel de nutrientes estaacuten dispersas en una matriz de suelo maacutes pobre En la praacutectica para conseguir este objetivo bastaraacute con aplicar de forma heterogeacutenea (pe en bandas o manchas) cualquier medida ecotecnoloacutegica para aumentar la fertilidad Para facilitar el eacutexito de esta medida podemos uti-lizar esta aplicacioacuten heterogeacutenea en conjunto con una plantacioacutensiembra selectiva de especies con-centrando las especies pioneras en las partes no fertilizadas y las especies maacutes competitivas en zo-nas maacutes feacutertiles (Booth et al 1999) De esta forma podemos compatibilizar dos objetivos de la restau-racioacuten ecoloacutegica de los taludes de carretera esto es reducir la erosioacuten (la biomasa que crezca en la zonas maacutes fertilizadas deberiacutea ser suficiente para ello) y una mayor diversidad y aceleracioacuten de la sucesioacuten secundaria (quedaraacuten huecos libres para la llegada de nuevas especies) la aplicacioacuten heterogeacutenea de este tipo de teacutecnicas supondriacutea ademaacutes una reduc-cioacuten de costes

4 Una mayor fertilidad del suelo no siempre es positiva

Como se discute en el apartado siguiente relativo a la introduccioacuten de especies herbaacuteceas la inclusioacuten de especies de crecimiento raacutepido no siempre es recomendable ya que pueden obstaculizar la lle-gada y establecimiento de otras especies reducir la diversidad y frenar la sucesioacuten secundaria (Ma-tesanz et al 2008 Garciacutea-Palacios et al 2010)

Ademaacutes pueden conllevar la introduccioacuten de es-pecies invasoras tanto en los taludes restaurados como en las zonas cercanas generando problemas ambientales graves (Constaacuten-Nava et al 2007 Ma-tesanz et al 2008) En algunos taludes podemos encontrar suelos feacutertiles y adecuados para el cre-cimiento vegetal donde la fertilizacioacuten no es ne-cesaria Sin embargo estos taludes son sistemas proclives a albergar especies agresivas o incluso invasoras capaces de explotar al maacuteximo los re-cursos disponibles reduciendo la presencia de las demaacutes especies Esto reduce la diversidad bioloacutegi-ca de los herbazales de talud y nos aleja del ob-jetivo final de la restauracioacuten por lo que en estos casos la reduccioacuten de la fertilidad del suelo pue-de ayudarnos a reducir la presencia de especies indeseables Esta reduccioacuten de los nutrientes del suelo restaraacute habilidad competitiva a las especies agresivas permitiendo la presencia de un mayor nuacutemero de especies La medida mejor estudiada y maacutes efectiva para reducir la fertilidad del suelo es la fertilizacioacuten con carbono (ya sea azuacutecar serriacuten paja de cereal residuos de papel restos de poda

triturados etc Podeacuteis dirigiros al Capiacutetulo 4 para maacutes informacioacuten) Esta teacutecnica permite aumentar la relacioacuten entre carbono y nitroacutegeno del suelo haciendo maacutes difiacutecil para las plantas la asimilacioacuten de nitroacutegeno elemento esencial para su crecimien-to Con esta medida se puede reducir la dominan-cia de estas especies agresivas adaptadas a ob-tener de una forma maacutes raacutepida y eficaz que otras especies este nutriente del suelo Aunque desco-nocemos si ha sido probada en la restauracioacuten de taludes espantildeoles esta teacutecnica ha funcionado con eacutexito en la restauracioacuten de otros sistemas medite-rraacuteneos en California (Gillespie y Allen 2008) y en herbazales donde la fertilizacioacuten con carbono re-dujo en un 54 (Minnesota) y en un 62 (Ohio) la biomasa de especies invasoras (Bluementhal et al 2003 Averett et al 2004) El uso del material rico en carbono aplicado deberaacute estar sujeto a la cer-caniacutea de los diversos materiales anteriormente ci-tados para evitar el encarecimiento de esta medi-da y debe ser aplicada uacutenicamente en lugares con sustratos ricos donde la amenaza de dispersioacuten de estas especies invasoras o agresivas sea elevada

IV TEacuteCNICAS DESTINADAS A MEJORAR LA LLEGADA Y ESTABLECIMIENTO DE HERBAacuteCEAS (HIDROSIEMBRAS)

La introduccioacuten de especies herbaacuteceas es una de las teacutecnicas maacutes populares para la restauracioacuten de talu-des de infraestructuras lineales debido a su poten-cial capacidad para proteger el suelo a corto plazo El objetivo principal de estas teacutecnicas es aumentar raacutepidamente la cubierta vegetal a traveacutes de la siem-bra de especies vegetales de raacutepido crecimiento que deben dar paso maacutes adelante a especies peren-nes y lentildeosas tiacutepicas de etapas sucesionales maacutes avanzadas

La teacutecnica maacutes empleada para acelerar el estable-cimiento de esta cubierta herbaacutecea es la hidro-siembra Con frecuencia esta teacutecnica constituye el mayor porcentaje del presupuesto dedicado a las medidas preventivas Esta teacutecnica consiste en la proyeccioacuten sobre el terreno de una mezcla acuosa de semillas mulch fertilizantes y sustancias ad-herentes (Tabla 4) Es una teacutecnica de faacutecil aplica-cioacuten a gran escala porque se realiza con medios mecaacutenicos especializados dotados de equipos de

bombeo (Figura 6) Las siembras muestran las si-guientes ventajas

bull La vegetacioacuten se establece un 20-25 maacutes raacutepi-do que con cualquier otra alternativa mecaacutenica o siembra manual

bull El mulch de fibras vegetales del que se acompa-ntildea la hidrosiembra genera condiciones favorables para una raacutepida germinacioacuten

bull Se pueden alcanzar taludes difiacutecilmente accesi-bles

En el Capiacutetulo 5 de este manual se puede encon-trar informacioacuten detallada sobre algunas especies de hierbas que pueden funcionar en algunas zo-nas del sur sudeste y centro peninsular Ademaacutes se facilita una clave dicotoacutemica donde se describe bajo queacute condiciones es maacutes recomendable el uso de esta teacutecnica

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La hidrosiembra es una teacutecnica muy extendida para revegetar taludes de infraestructuras lineales A con-tinuacioacuten se muestran una serie de especies que ha-bitualmente forman parte de los coacutecteles de semillas que se aplican mediante esta teacutecnica En la paacutegina de la izquierda alfalfa (Medicago sativa) sobre es-tas liacuteneas de izquierda a derecha y de arriba abajo pipirigallo (Onobrychis viciifolia) Agropyron crista-tum subsp pectinatum dactilo (Dactylis glomerata) y cantildeuela (Festuca arundinacea) Cabe destacar que solo las dos uacuteltimas especies son autoacutectonas de la flora peninsular Autor Ignacio Mola

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Tabla 4 Ejemplo de composicioacuten caracteriacutestica de una hidrosiembra comercial

ESPECIES AUTOacuteCTONAS

ESTABILIZADOR ABONO MULCH TIPO DE MULCH AGUAAacuteCIDOS

HUacuteMICOS

300 kg de semillasha

20 kgha (aunque variacutea mucho en funcioacuten del tipo de producto)

400 kgha2000 kgha

Fibra corta de madera heno y alfalfa

2000 lha

100-150 kgha

Figura 6 Hidrosiembra de un talud de desmonte desde un camioacuten con moto-bomba (Foto Mariacutea Altamirano-OHL)

V INTRODUCCIOacuteN Y ESTABLECIMIENTO DE ESPECIES LENtildeOSAS

Como se ha mencionado con anterioridad (Capiacutetulo 6) la introduccioacuten de especies lentildeosas tiene gran intereacutes en la restauracioacuten ecoloacutegica La cubierta de lentildeosas puede acelerar la sucesioacuten secundaria requiere esca-so mantenimiento (disminuye la frecuencia de siegas)

mejora la integracioacuten paisajiacutestica y garantiza ciertas funciones asociadas a las plantas herbaacuteceas La Tabla 5 enumera las principales alternativas ecotecnoloacutegicas y los materiales lentildeosos vivos que se adecuan a cada una de ellas

Tabla 5 Teacutecnicas constructivas de ingenieriacutea natural y materiales lentildeosos adecuados para su implementacioacuten (adaptado de Schluumlter 1986)

MATERIAL LENtildeOSO VIVO

SISTEMAS CONSTRUCTIVOS SIMPLES

SISTEMAS CONSTRUCTIVOS COMBINADOS

Varas

Cubierta de ramas

Fajinas

Trenzados o empalizadas

Tallos y ramas

Fajinas de vegetacioacuten

Drenaje vegetado

Fajinas

Trenzados o empalizadas

Gradas de vegetacioacuten (Enrejados)

Gaviones vegetados

Muros tipo lsquoCribwallrsquo y otros muros de soporte (entramados)

Muros de piedra seca

Escolleras

Tierra armada

Estacas Estaquillado

Raiacuteces Tocones enraizados viables

Plantas enraizadasEstablecimiento de lentildeosas

Fajinas de vegetacioacuten

Semillas Siembras

Los meacutetodos de establecimiento de la vegetacioacuten son muy variados En este capiacutetulo los clasificamos en tres grandes grupos

bull Establecimiento de la vegetacioacuten sin apoyo de estructuras artificiales

bull Establecimiento de la vegetacioacuten con apoyo de estas (teacutecnicas combinadas)

bull Teacutecnicas complementarias

1 Establecimiento de la vegetacioacuten sin apoyo de estructuras artificiales

Se pueden establecer dos grupos

bull Teacutecnicas de cobertura destinadas a evitar la erosioacuten superficial mediante el incremento raacute-pido de la vegetacioacuten se discuten ampliamente en el apartado dedicado a la erosioacuten de este mismo capiacutetulo

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bull Teacutecnicas de estabilizacioacuten permiten estabilizar el terreno hasta un maacuteximo de 2 m de profun-didad aproximadamente utilizando plantas lentildeosas obtenidas por reproduccioacuten vegetativa colocadas en filas horizontales Las plantas de-ben ser capaces de emitir raiacuteces adventicias de modo que puedan originar un entramado que permita la fijacioacuten y estabilizacioacuten del terreno Estas teacutecnicas son de muy difiacutecil dimensiona-miento desde el punto de vista de los paraacute-metros mecaacutenicos por lo que es recomendable cierta experiencia para que cumplan su objetivo de forma satisfactoria

Este conjunto de teacutecnicas se aplica uacutenicamente cuando existe una garantiacutea de que durante su desa-rrollo no se produciraacuten perturbaciones que puedan generar riesgos inaceptables o cuando estos riesgos no justifiquen la utilizacioacuten de meacutetodos de estabili-zacioacuten maacutes costosos

a Estaquillados

Consisten en la utilizacioacuten de trozos de ramas verdes hincadas en el suelo Las ramas de varios antildeos deben estar sanas mostrar una con corteza fina sin ramas laterales y sin estriacuteas y deben tener una longitud media de 40-100 cm y un diaacutemetro de 2-8 cm Deben estar afiladas por un extremo para facilitar su insercioacuten hasta que apenas 5 cm emerjan de la superficie Es muy importante que la longitud sea suficiente para llegar hasta el nivel freaacutetico u horizontes edaacuteficos con suficiente hume-dad durante el verano

Esta teacutecnica permite la introduccioacuten sencilla y raacutepi-da de un gran nuacutemero de plantas que aseguraraacute a medio-largo plazo una cobertura y una estructuracioacuten radicular densa de los taludes Puede tambieacuten incluir-se en esta teacutecnica la utilizacioacuten de estacas de sauce de 2-3 m de longitud para seguridad y anclaje de los taludes de maacutergenes de riacuteos Esta teacutecnica estaacute especialmente recomendada para reparar pequentildeos deslizamientos y asentamientos debidos al exceso de humedad del suelo en lugares sin problemas gra-ves de estabilidad Tambieacuten se emplea como fijacioacuten de otros elementos de control de la erosioacuten como los geotextiles las mantas orgaacutenicas etc Tambieacuten ayuda al control de la erosioacuten permitiendo la esta-bilizacioacuten de taludes sometidos a la erosioacuten fluvial Cuando las estaquillas se han desarrollado la cubier-ta vegetal contribuye a estabilizar el talud y si las especies introducidas no son agresivas o demasiado competitivas con otras especies pueden favorecer la colonizacioacuten por otras especies del entorno Los es-taquillados se adaptan muy bien a la instalacioacuten de vegetacioacuten en escolleras por permitir una instalacioacuten posterior a la construccioacuten de la escollera aseguran-do de este modo su revegetacioacuten sin necesidad de intervenciones aparatosas o caras Solo es necesario abrir agujeros donde se introduce suelo y se clava la estaquilla garantizando que esta quede clavada en el suelo subyacente a la escollera (Figura 7)

Importa auacuten referir el intereacutes de la utilizacioacuten de esta-quillas para fines estructurales y funcionales como en empalizadas de retencioacuten de escorrentiacutea en caacutercavas (Figura 6) en cepillos o peines vivos de reconstruc-cioacuten de orillas erosionadas o en cunetas de drenaje

Figura 7 Estaquillados en escolleras (adaptado de Florineth 2004)

Estaquilla de sauce 03 - 8 cm

Paja como proteccioacuten contra el arrastre de suelo

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b Empalizada trenzada viva

Constituye junto con las fajinas la teacutecnica de maacutes diversa utilizacioacuten desde la antiguumledad Puede ser utilizada en la proteccioacuten de orillas fluviales y en la estructuracioacuten y consolidacioacuten de taludes Es tambieacuten

una teacutecnica de ejecucioacuten sencilla que consiste en la realizacioacuten de un trenzado de ramas vivas de sauce (u otras especies adecuadas a la ecologiacutea y condiciones del lugar) que se anclaraacuten al suelo mediante estacas (que pueden ser vivas) o pique-tas (Figura 8)

Figura 8 Empalizadas trenzadas vivas en la orilla de un rio (taller AEIP Orense 2008 taller Ripidurable Alpiarccedila 2007 adaptado de Florineth 2004)

Trenzado de orilla fluvial

Trenzado diagonal

Ramas de sauce trenzadas en la direccioacuten de la escorrentiacutea y con la base insertada en la orilla Ramas de sauce 3-10 cm

Trenzado horizontal

Direccioacuten de la escorrentiacutea

Estaquilla de soporte 0 12-15 cm

0

Esta teacutecnica es muy uacutetil para la proteccioacuten de orillas de riacuteos donde la velocidad maacutexima del agua sea inferior a 35 ms (hay autores que indican un liacutemite mucho maacutes bajo alrededor de 15 ms) Tambieacuten se suelen utilizar en taludes para la estructuracioacuten de la capa superficial del suelo (hasta unos 20 cm de profundidad) Esta utilizacioacuten presenta limitaciones debido a la necesidad de una elevada humedad que garantice el desarrollo vegetativo del material utilizado Como alternativa podemos utilizar mate-rial muerto para apoyar el eacutexito de plantaciones de ejemplares ya enraizados (veacutease tambieacuten el aparta-do de este capiacutetulo dedicado a las fajinas) En talu-des hay diversos modos de instalacioacuten siendo los principales las empalizadas en diagonal (Figura 9) y las empalizadas horizontales sencillas

Figura 9 Empalizada trenzada en diagonal en la consolidacioacuten de taludes

c Cobertura o estera de ramaje

Esta teacutecnica es particularmente adecuada para aumen-tar la cobertura y promover la consolidacioacuten de orillas de riacuteos donde se registra torrencialidad y velocidades muy elevadas (tensiones de arrastre superiores a 200 Nm2) Consiste en recubrir el talud con una capa de ramas de varios metros de longitud disponiendo el extremo maacutes grueso bajo el nivel del agua y la parte ramificada en la zona superior de los taludes (Figura 10) Se fijan utilizando piquetas o estacas dispuestas

en diagonal a intervalos de 15 m A estas estacas se fija un alambre grueso que se tensa al clavar las estacas presionando las ramas contra el suelo La base es a continuacioacuten consolidada con piedras en escollera (para riacuteos de elevado caudal y velocidad) o bien con fajinas o troncos de madera en riacuteos maacutes tranquilos Toda la estructura es finalmente cubier-ta con una ligera capa de suelo Su construccioacuten a pesar de ser relativamente sencilla exige cuidados particulares para garantizar su eficacia y resistencia al flujo del agua Las esteras protegen al talud de la accioacuten de la corriente y desarrollan con el tiempo una espesa franja de vegetacioacuten El rozamiento de la corriente con la estera reduce su velocidad y por consiguiente su energiacutea erosiva Las ramas detienen los materiales y sedimentos arrastrados con lo que se crea un colchoacuten protector que aiacutesla la orilla de la accioacuten directa del agua y del oleaje (Mataix 2003) No obstante es fundamental fijar bien estas esteras de ramaje al suelo ya que despueacutes de lluvias importan-tes estos materiales podriacutean ser arrastrados llegan-do a bloquear los conductos de desaguumle del talud y provocar problemas serios

Esta teacutecnica es muy exigente en material tiempo y mano de obra especializada (pe para la construc-cioacuten de la escollera es necesaria maquinaria pesa-da) por lo que solo debe ser utilizada en zonas don-de se debe garantizar una proteccioacuten inmediata y de elevada eficacia contra la erosioacuten fluvial Se adapta particularmente a la reconstruccioacuten de frentes de erosioacuten activos y a la proteccioacuten de infraestructuras como puentes y represas Hay que tener presente que esta teacutecnica solo se puede utilizar en orillas con una pendiente maacutexima de unos 30deg No se adapta a intervenciones en taludes no fluviales por su gran necesidad de agua

Figura 10 Fijacioacuten con alambres tensos (taller praacutectico Viena Austria)

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IacuteNDICE

d Lecho de ramajes

Este es un sistema claacutesico y muy eficaz de consoli-dacioacuten de taludes y pendientes Tiene la ventaja de asegurar inmediatamente una estructuracioacuten de la pendiente hasta una profundidad de 15 m aproxi-madamente Puede ser realizado mediante ramas de plantas susceptibles de crecer o en combinacioacuten con plantas enraizadas criadas en vivero Es apto para taludes de suelo desnudo y puede integrarse en muros armados de mantas orgaacutenicas La mayor limitacioacuten que presenta este meacutetodo es que son po-cas las plantas que tienen capacidad de desarrollo vegetativo en condiciones de baja humedad que suelen presentar los taludes y laderas en medios mediterraacuteneos En estos ambientes es recomendable utilizar solo planta cultivada en contenedor o en su defecto plantas a raiacutez desnuda (veacutease Capiacutetulo 6)

La construccioacuten de lechos de ramaje es muy senci-lla Se empieza por excavar una primera berma con

una contrapendiente superior de 5deg y una profun-didad entre 05-15 m (Figura 11) Se disponen en-seguida las ramas y eventualmente las plantas ya enraizadas (de longitud igual o superior a la pro-fundidad de la berma) de modo que cubran la ber-ma Las ramas deben sobresalir del terreno unos 10 cm para favorecer el rebrote Finalmente se abre una nueva berma 15-30 metros maacutes arriba utilizando el suelo extraiacutedo para rellenar la berma inferior este procedimiento se repite hasta culmi-nar la pendiente Estos lechos se adaptan tambieacuten a sistemas constructivos combinados como son los muros verdes armados de mantas orgaacutenicas donde se utilizan los lechos de ramajes entre las lsquoalmohadasrsquo o tongadas de suelo introducido (Fi-gura 11) Esta teacutecnica se adapta a la construccioacuten de muros verdes inclusive muros de proteccioacuten contra el ruido aunque no son nada recomenda-bles en medios secos ya que el establecimiento de plantones o estaquillas de este tamantildeo es muy difiacutecil en estos medios

Figura 11 Muro verde de tongadas de suelo introducido en mantas orgaacutenicas con lechos de ramaje entre las tongadas (Meran Austria to-mado de Florineth 2004)

2 Establecimiento de la vegetacioacuten con apoyo de estructuras artificiales (teacutecnicas combinadas)

El establecimiento espontaacuteneo de la vegetacioacuten en los taludes frecuentemente es muy difiacutecil cuando las condiciones ambientales son muy limitantes En estos casos es recomendable la utilizacioacuten de teacutec-nicas que realicen las funciones que la vegetacioacuten no puede hacer a corto y medio plazo a la vez que facilitan su establecimiento Estas intervenciones conjugan elementos vegetales con materiales inertes como madera acero galvanizado piedra u hormigoacuten

materiales que actuacutean como estabilizadores hasta que las plantas son capaces de realizar esta funcioacuten

Existen dos tipos de estructuras combinadas a) las estructuras de soporte que se destinan a estabilizar una masa de tierra muy inestable en profundidad (equiparables en teacuterminos geoteacutecnicos a muros de soporte) y b) las estructuras de cobertura y con-solidacioacuten destinadas a estabilizar las capas maacutes superficiales del suelo (hasta 30 cm) La presencia de especies lentildeosas en estas estructuras es de im-portancia capital ya que garantizan su eficacia a medio-largo plazo El desarrollo de la vegetacioacuten

Tierra de relleno

Rocas

Ramas y varas capaces de desarrolllar raiacuteces

Manta orgaacutenica(700-800 gm2)

10

050

-08

0 m

150-200 m

y especialmente el crecimiento de raiacuteces resistentes y profundas proporciona cohesioacuten y anclaje a las distintas capas de suelo haciendo innecesarias las estructuras inertes de soporte

a Entramados vivos

Estas estructuras se adaptan muy bien al soporte de pendientes y a la proteccioacuten y reconstruccioacuten de orillas fluviales muy degradadas Tambieacuten pue-den servir en obras transversales de disipacioacuten de energiacutea en cauces torrenciales de montantildea Su construccioacuten se hace con troncos de diaacutemetro de

entre 10 y 40 cm en capas alternas presentado normalmente una pendiente estructural de unos 5-10deg (Figura 12) Su estructura puede ser sencilla es decir con solo una pared longitudinal frontal (Figura 13) o doble con dos paredes longitudi-nales (Figura 12) Puede ser anclado con estacas o piquetas en medios muy inestables en profun-didad Posteriormente se rellena con tierra y en cada nivel se distribuyen ramas con capacidad vegetativa o plantas con raiacuteces de modo que lle-guen al suelo de la base Pueden incluir rellenos de piedra en la base o estar asociados a drenaje en las aplicaciones en pendientes

Figura 12 Entramado vivo doble combinado con un enrejado vivo y un drenaje para el soporte y consolidacioacuten de una pendiente (tomado de Martinho 2005)

Estaquillados vivos de arbustos autoacutectonos

Tronco horizontal superficialOslash = 12-20 cmL = 1-5 m

Tronco horizontal bajo tierraOslash = 12-20 cmL = 1-5 m

Tronco de fijacioacuten al sustratoOslash = 8-10 cmL = 1 m

Tronco verticalOslash = 12-20 cmL = 1-5 m

Anclaje

Tradicionalmente la fijacioacuten de los palos trans-versales se ha hecho con clavos Actualmente se recomienda el sistema de lsquojunta tipo banderarsquo con el fin de minimizar heridas en el lentildeo con el consiguiente riesgo de invasioacuten de patoacutegenos En funcioacuten del medio del tipo de aplicacioacuten y de la intensidad de los factores de tensioacuten a que

estaraacuten sujetas asiacute se distinguen los procedimien-tos constructivos

- Obras fluviales

En estas obras debido a la accioacuten erosiva hay que garantizar que las aacutereas abiertas esteacuten protegidas

Geodreno

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IacuteNDICE

contra la erosioacuten por filtros de piedras fajinas o geotextil de modo que se garantice la integridad estructural de la construccioacuten

bull Longitudinales (proteccioacuten o reconstruccioacuten de orillas) este tipo de intervenciones debido a la permanente accioacuten erosiva del agua tienen que ser cerradas en la parte frontal con piedras y faji-nas de modo que impidan la erosioacuten del material de relleno La disposicioacuten relativa de los palos transversales (superpuestos o alternados) no es criacutetica puesto que las tensiones son longitudina-les (el flujo del agua del riacuteo)

bull Transversales utilizados normalmente como estructuras de retencioacuten torrencial estos entra-mados son normalmente rellenados con piedra pudiendo sin embargo incluir vegetacioacuten lentildeosa que pueda aumentar el efecto de retencioacuten del flujo hiacutedrico Esta vegetacioacuten estaraacute compuesta por raiacuteces o ramas con capacidad vegetativa

- Obras de consolidacioacuten y soporte en pendientes

En estas obras en las que las tensiones son trans-versales la estructura es criacutetica Esta debe repartir estas fuerzas transversales de la forma maacutes homo-geacutenea por lo que es criacutetica en este caso la distri-bucioacuten alternada de los troncos Esto es importante no solamente cuando los entramados son utilizados como muros de soporte sino tambieacuten cuando son utilizados como elemento estructural de soporte de una carretera donde la correcta distribucioacuten de car-gas es criacutetica Como el principal factor erosivo es la lluvia no hay necesidad de instalar filtros entre los troncos siendo suficiente respetar el aacutengulo de es-tabilidad del material de relleno para que la estruc-tura quede estabilizada despueacutes de la construccioacuten hacia el inicio del desarrollo de la vegetacioacuten

- Otros tipos de entramados

En situaciones donde las tensiones y las masas del suelo que se pretende sujetar no exigen estructuras tan comple-jas y caras como los entramados dobles pueden utilizar-se entramados sencillos de una sola pared entramados tipo Roma o entramados modulares tipo Latina (Figura 13)

Figura 13 Entramado sencillo de una pared (A tomado de Florineth 2004) entramado tipo lsquoRomarsquo (Paolo Cornellini B) y entramado tipo lsquoLatinarsquo (Paolo Cornelini y Sauli 2005 C y D)

Estaquilla de aceroOslash 10-20 cm

100-150 m

30-50

200

-25

0 m

A

B

C D

b Gaviones revegetados con ramas vivas

Los gaviones son estructuras conformadas por una malla de alambre prefabricada que es rellenada con piedras Para revegetar estos gaviones se les puede aportar una capa de tierra feacutertil introduciendo des-pueacutes ramas vivas o plantas enraizadas de longitud superior a la anchura del gavioacuten de modo que se ga-rantice un buen desarrollo de las raiacuteces Al enraizar y crecer estas plantas ayudaraacuten a fijar las estructuras al talud daacutendole estabilidad mejorando su integracioacuten paisajiacutestica y garantizando una estabilizacioacuten esen-cialmente natural (Figura 14) Se utilizan en la defensa longitudinal de orillas o para soporte y consolidacioacuten de taludes con pendientes muy elevadas o inestables

c Tierra armada (geotextiles reforzados con lechos de ramaje)

Para armar esta estructura se utilizan mallas de geo-textil que pueden estar reforzadas con mallas de ace-ro rellenadas con unos 50 cm de tierra vegetal Una vez construida la estructura se procede a la plantacioacuten de especies lentildeosas o a la instalacioacuten de un lecho de ramaje que mejoraraacuten la estabilidad de toda la es-tructura y aumentaraacuten la integracioacuten paisajiacutestica Se utiliza este tipo de intervenciones en la estabilizacioacuten

Figura 14 Gaviones revegetados esquema de su estructura (Florineth 2004) y procedimiento de construccioacuten

Estaquillas

Piedras dispuestas manualmente

10-15 cm

100 m

100

m

de taludes de pendiente media-alta en zonas de ribera o en la construccioacuten de muros de proteccioacuten sonora

d Enrejado vivo

Los enrejados vivos son estructuras de madera de consolidacioacuten superficial de taludes con una altura de unos 20 m y pendientes de 30deg aproximadamen-te Se destinan a consolidar las capas superiores de la pendiente hasta una profundidad de 30-40 cm (en funcioacuten del tipo de entramado) Se construyen

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IacuteNDICE

utilizando troncos de diaacutemetros entre 10 y 30 cm en una estructura enrejada sencilla o doble (Figura 12) La distancia vertical entre los distintos niveles trans-versales es funcioacuten del aacutengulo de estabilidad del sue-lo y debe garantizar la ausencia de movimientos de suelo La introduccioacuten de la vegetacioacuten puede hacerse por plantacioacuten o estaquillado y puede ser posterior a la construccioacuten del enrejado Eso significa que es posible construir el enrejado fuera del periacuteodo vege-tativo a diferencia de lo que ocurre en la mayoriacutea de sistemas descritos

e Peldantildeos de lentildea

Esta es una teacutecnica sencilla de consolidacioacuten superfi-cial de suelos erosionados y de reduccioacuten de la energiacutea de la escorrentiacutea por reduccioacuten de la trayectoria lineal del agua a lo largo de la ladera Simultaacuteneamente constituyen un soporte magnifico para la instalacioacuten de vegetacioacuten por la acumulacioacuten de partiacuteculas finas y por la reduccioacuten de la erosividad en estos peldantildeos Su construccioacuten se hace clavando estacas a lo largo de la ladera por detraacutes de las cuales se disponen horizontal-mente uno o dos troncos Detraacutes de estos se pueden construir lechos de ramaje o realizar plantaciones de lentildeosas Facilitan tambieacuten el eacutexito de siembras entre las liacuteneas de peldantildeos al reducir la energiacutea de la esco-rrentiacutea y la consecuente erosioacuten

3 Teacutecnicas complementarias

Junto con las teacutecnicas constructivas propiamente dichas se puede emplear otras teacutecnicas que terminen y comple-menten las anteriores pero que no cumplan un objetivo de estabilizacioacuten o de proteccioacuten contra la erosioacuten Es el caso de la plantacioacuten de especies lentildeosas con el obje-tivo de acelerar el desarrollo de la sucesioacuten la creacioacuten de pantallas sonoras los drenajes etc Este conjunto de teacutecnicas se detallan en el Capiacutetulo 5 de este manual

VI OTRAS TEacuteCNICAS

No es el propoacutesito de este capiacutetulo discutir teacutecnicas que no tengan como objetivo final el reestablecimiento de una cubierta vegetal lo maacutes parecida a la original po-sible Sin embargo creemos importante que el lector sepa de la existencia de otras posibles medidas (no eco-tecnoloacutegicas) que pueden servir para aumentar la inte-gracioacuten paisajiacutestica en zonas donde es completamente imposible cualquier otro tipo de restauracioacuten ambiental El mejor ejemplo de esto son los productos de envejeci-miento para disimular taludes yo canteras de roca viva que no son colonizables por la vegetacioacuten Esta teacutecnica no forma parte de la restauracioacuten ecoloacutegica pero pue-de ser uacutetil en ocasiones concretas (pe en canteras de maacutermol donde la colonizacioacuten vegetal es enormemente difiacutecil en las paredes resultantes)

iquestNecesitamos realmente aplicar medidas ecotecnoloacutegicas

Depende del caso Sobre todo tenemos que fijarnos en la gravedad de los efectos de la obra sobre los distintos procesos ecoloacutegicos y en si estos se pue-den reestablecer de forma natural o no Tambieacuten son importantes las constricciones a las que nos pueden llevar los plazos de las diferentes administraciones

iquestQueacute procesos ecoloacutegicos estaacuten dantildeados

Es fundamental estudiar en detalle cuaacuteles son los pro-cesos ecoloacutegicos que se han dantildeado Por ejemplo si no tenemos preocupacioacuten acerca de las limitaciones a la dispersioacuten de las semillas de las especies vegetales de intereacutes no tiene sentido plantearse siembras

iquestQueacute materiales son faacuteciles de conseguir y cercanos

Para las semillas las plantas las fuentes de carbono las enmiendas orgaacutenicas y los distintos materiales

vegetales que se describen en este capiacutetulo debe-remos dar preferencia a los que son originarios de la zona y por tanto potencialmente maacutes adaptados a las condiciones locales

iquestCuaacutel es la medida maacutes adecuada para mi sitio concreto (pendiente tipo de suelo climahellip)

Esta es otra de las preguntas clave que tiene difiacutecil res-puesta En este capiacutetulo tratamos de enfatizar que no se deben copiar lsquorecetasrsquo directamente de proyectos de zonas con climas distintos sin la previa evaluacioacuten criacutetica de sus limitaciones en nuestra zona Tenemos que tener muy claras las teacutecnicas disponibles y cuaacutel es la maacutes barata eficaz y menos dantildeina de todas las posibles para nuestro caso concreto La breve des-cripcioacuten dada en este capiacutetulo y las fuentes de infor-macioacuten recomendadas ayudaraacuten al lector a decidir En este capiacutetulo ofrecemos un aacuterbol de decisiones (Figura 1) y una tabla-resumen sobre todas las teacutecnicas men-cionadas en este capiacutetulo los procesos que ayudan a reestablecer y su coste (Tabla 6) que esperemos que faciliten al lector la toma de esta difiacutecil decisioacuten

VII PREGUNTAS CLAVE

Tabla 6 Resumen de las teacutecnicas detalladas en este capiacutetulo los procesos que sirven para reestablecer las situaciones en las que son maacutes recomendables y una estima cualitativa de su coste

TEacuteCNICA CONTROL DE EROSIOacuteN

FERTILIDAD ESTABILIDAD INTRODUCCIOacuteN DE PLANTAS

DRENAJE SE RECOMIENDA EN

COSTE

lt02 M gt02 M

Mallas o enrejados metaacutelicos

Taludes con pendientes elevadas de roca fracturada o granulometriacutea gruesa

Medio

Geomallas volumeacutetricas

Taludes de pendientes elevadas (gt40ordm) con suelos pobres de desmonte mejora la retencioacuten de finos

Medio

Geoceldas

Canalizaciones y encauzamientos de barranco aplicar junto con hidrosiembra NO en taludes de pendiente 30ordm ni desmontes

Medio

Mantas orgaacutenicas

Control de erosioacuten laminar rellenado de regueros cunetas y caacutercavas revestimiento de muros soporte de trepadoras Frenan elementos finos Usar con fajinas o biorrollos o con mallas sinteacuteticas de gran duracioacuten

Mediobajo

Mallas o redes orgaacutenicas yo sinteacuteticas

Taludes verticales Utilizar junto con geotextiles Frena la erosioacuten por caacutercavas

Medio

Muros de pie

Reduce la erosioacuten en taludes muy verticales utilizar junto con geotextiles o mantas orgaacutenicas

Alto

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IacuteNDICE

TEacuteCNICA CONTROL DE EROSIOacuteN

FERTILIDAD ESTABILIDAD INTRODUCCIOacuteN DE PLANTAS

DRENAJE SE RECOMIENDA EN

COSTE

lt02 M gt02 M

Fajinas o fajinados

Restauracioacuten de caacutercavas riberas o lugares huacutemedos (fajinas vivas) Frenan la erosioacuten en taludes no muy verticales (gt35ordm) Conviene aplicar con teacutecnicas a maacutes corto plazo (mantas orgaacutenicas hidrosiembras entramados de ramas)

Bajo

Lechos y entramados de ramas y colchones de vegetacioacuten

Aplicable sobre todo en lechos de riacuteos Tambieacuten para formar islas o como fitodepuradoras

Bajo

Encachados

Evitar socavamiento o arrastre de estructuras en lechos de riacuteo

Alto

Fertilizacioacuten inorgaacutenica

Aumenta fertilidad del suelo es maacutes recomendable la orgaacutenica si el material disponible es bueno

Bajo

Fertilizacioacuten orgaacutenica

Aumenta la materia orgaacutenica del suelo reduce la erosioacuten y mejora el establecimiento vegetal

Bajo

Fertilizacioacuten con carbono

Taludes con elevada fertilidad y donde hemos detectado presencia de especies muy dominantes o catalogadas como invasoras

Depende de la cercaniacutea de fuentes de carbono

Tabla 6 Resumen de las teacutecnicas detalladas en este capiacutetulo los procesos que sirven para reestablecer las situaciones en las que son maacutes recomendables y una estima cualitativa de su coste (Continuacioacuten)

TEacuteCNICA CONTROL DE EROSIOacuteN

FERTILIDAD ESTABILIDAD INTRODUCCIOacuteN DE PLANTAS

DRENAJE SE RECOMIENDA EN

COSTE

lt02 M gt02 M

Hidrosiembras

Taludes de difiacutecil acceso o con elevado riesgo de erosioacuten Utilizar conjuntamente con teacutecnicas que aumenten la fertilidad del suelo Veacutease Capiacutetulo 5 de este manual

Medio

Estaquillado

Lugares con alta disponibilidad hiacutedrica Muy recomendado para pequentildeos deslizamientos debidos al exceso de humedad del suelo o como fijacioacuten de geotextiles o mantas orgaacutenicas Revegetacioacuten de escolleras

Bajo

Empalizada trenzada viva

Proteccioacuten de orillas (velocidad maacutexima de 15-35 ms si supera esto mejor estera de ramaje) Estructuracioacuten de taludes (siempre y cuando haya bastante humedad edaacutefica

Alto

Estera de ramaje

Para lugares con riesgo fluvial muy elevado

Alto

Entramados vivos

Orillas de riacuteo muy degradadas consolidacioacuten de pendientes en sitios huacutemedos

Medio

Tabla 6 Resumen de las teacutecnicas detalladas en este capiacutetulo los procesos que sirven para reestablecer las situaciones en las que son maacutes recomendables y una estima cualitativa de su coste (Continuacioacuten)

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IacuteNDICE

TEacuteCNICA CONTROL DE EROSIOacuteN

FERTILIDAD ESTABILIDAD INTRODUCCIOacuteN DE PLANTAS

DRENAJE SE RECOMIENDA EN

COSTE

lt02 M gt02 M

Gaviones revegetados con ramas vivas

En proteccioacuten de orillas o para soporte y consolidacioacuten de taludes con pendientes muy elevadas o inestables

Medio

Tierra armada

Taludes de pendiente media-alta en zonas de ribera o en la construccioacuten de muros de proteccioacuten sonora

Alto

Enrejado vivo

Consolidacioacuten superficial de taludes con una altura de hacia 20 m y pendientes de lt30ordm

Alto

Peldantildeos de lentildea

Consolidacioacuten superficial de suelos erosionados y de reduccioacuten de la energiacutea de la escorrentiacutea

Bajo

Tabla 6 Resumen de las teacutecnicas detalladas en este capiacutetulo los procesos que sirven para reestablecer las situaciones en las que son maacutes recomendables y una estima cualitativa de su coste (Continuacioacuten)

iquestDoacutende

Autoviacutea A-30 en su variante de Molina del Segura Murcia (Figura 15)

iquestQueacute se hizo

Con el objetivo de evaluar la efectividad de las mantas orgaacutenicas en clima mediterraacuteneo se reali-zoacute un experimento para cuantificar la cantidad de soacutelidos arrastrados y niveles de supervivencia de plaacutentulas sobre taludes en terrapleacuten Para ello se aplicaron mantas orgaacutenicas a base de esparto y coco comprobando los niveles de erosioacuten del sue-lo y el crecimiento de los plantones introducidos La eficacia del tratamiento se valoroacute comparaacutendo-lo con un control con plantacioacuten e hidrosiembra pero sin ninguacuten tipo de manta orgaacutenica (Contreras y Navarro-Quercop 1996 para maacutes detalles)

iquestQue ocurrioacute

Las mantas orgaacutenicas fueron mucho maacutes eficaces que el control (Figura 16) Las peacuterdidas de suelo

en las parcelas protegidas con manta de esparto y de fibra de coco oscilaron entre 2 y 5 Tmha y antildeo mientras que en la parcela control el maacuteximo de peacuterdida fue de 148 Tmha y antildeo Ademaacutes de reducir la peacuterdida de suelo sobre todo la de la fraccioacuten de granulometriacutea maacutes gruesa las mantas orgaacutenicas tambieacuten incrementaron el desarrollo general de la plantacioacuten Las zonas sin las mantas mostraron un riesgo evidente de descalce y desaparicioacuten de las plantas por efecto de la peacuterdida de suelo

En la restauracioacuten de infraestructuras lineales con frecuencia aparecen problemas derivados de la au-sencia de una correcta evaluacioacuten de alternativas Cuando nos enfrentamos a la restauracioacuten ecoloacutegi-ca de infraestructuras lineales (o cualquier otro tipo de restauracioacuten) la primera alternativa que debe-mos barajar es no actuar dejando que los procesos naturales sigan su curso Alternativamente se pue-de corregir los procesos naturales necesarios para que la restauracioacuten ocurra de forma natural Solo si las anteriores alternativas no ofrecen garantiacuteas de eacutexito se debe acudir a la aplicacioacuten de las medidas de menor impacto y coste que permitan que estos procesos se reactiven Si se estima que ninguna de estas opciones permitiriacutea alcanzar los objetivos de la restauracioacuten se debe aplicar teacutecnicas de mayor impacto que sustituyan de forma temporal los pro-cesos ecoloacutegicos interrumpidos Normalmente las teacutecnicas ecotecnoloacutegicas deberiacutean ser aplicables soacutelo cuando la primera y la segunda alternativas

no son a priori viables Seraacute el gestor de la obra quien tenga que decidir las medidas maacutes indicadas para cada situacioacuten Ademaacutes de los condicionantes puramente ecoloacutegicos esta decisioacuten dependeraacute del riesgo inminente de erosioacuten y de la presioacuten social y poliacutetica para conseguir una integracioacuten paisajiacutesti-ca en el menor tiempo posible La Figura 1 muestra las alternativas principales que deben considerarse en cada situacioacuten Maacutes adelante en este capiacutetulo se ofrece maacutes informacioacuten sobre cada una ellas y sobre las limitaciones que plantean

Otro gran problema indirectamente asociado a la aplicacioacuten de estas teacutecnicas es la forma y espe-cialmente el periacuteodo de ejecucioacuten Ademaacutes del fracaso de la intervencioacuten que conlleva una ejecu-cioacuten deficiente el mal uso de estas teacutecnicas supo-ne con frecuencia un encarecimiento del proyecto de restauracioacuten A lo largo de este texto aporta-mos diversos ejemplos de estas deficiencias

VIII ERRORES HABITUALES

IX UN EJEMPLO DE EacuteXITO

Figura 15 Vista del talud del ejemplo

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IacuteNDICE

X UN EJEMPLO DE FRACASO

iquestDoacutende

El grupo de trabajo de Ecologiacutea y Fisiologiacutea de Plantas Mediterraacuteneas del Centro de Ciencias Medioambientales del CSIC durante los antildeos 2000-2005 llevoacute a cabo un proceso de seguimien-to y mejora de las actuaciones de revegetacioacuten e hidrosiembra realizadas en dos tramos de la Au-topista de la Costa del Sol (Maacutelaga y Caacutediz) La zona presenta una temperatura media de 185 degC y un reacutegimen de precipitacioacuten de 873 mm anuales Las formaciones litoloacutegicas maacutes importantes estaacuten dominadas por areniscas y afloramientos calizos ocasionales

iquestQueacute se hizo

Los taludes fueron hidrosembrados con una mez-cla comercial de semillas (mayoritariamente le-guminosas y gramiacuteneas) y componentes para es-tabilizar y fertilizar el suelo (veacutease Tabla 1) La densidad de la mezcla aplicada fue de 35 gm-2 La hidrosiembra se realizoacute en dos pasadas la pri-mera con todos los ingredientes y la segunda solo con los estabilizantes y el mulch habitual

iquestQue ocurrioacute

Mientras que en los terraplenes se halloacute una cober-tura vegetal media de casi el 80 en los desmontes

fue del 20 La riqueza floriacutestica tambieacuten fue ma-yor en los terraplenes La comparacioacuten de terraple-nes hidrosembrados con aquellos que no lo fueron reveloacute escasas diferencias en la cobertura biomasa y riqueza de especies La hidrosiembra no obtuvo mejores resultados que la propia colonizacioacuten na-tural en estas condiciones favorables

iquestPor queacute ocurrioacute y como solucionarlo

1) Una de las principales causas es que la hidro-siembra se hizo fuera de la eacutepoca recomendable Hay que tener en cuenta el tipo de clima el tipo de talud (en desmontes seraacute siempre maacutes difiacutecil que funcione esta teacutecnica) la pendiente y las ca-racteriacutesticas del suelo Tambieacuten la existencia de vegetacioacuten proacutexima que ayude a la propagacioacuten de especies cercanas Cuando estos factores son los adecuados la hidrosiembra deberiacutea ser recon-siderada y en ciertos casos suspendida

2) Las difiacuteciles condiciones de los desmontes limitan la colonizacioacuten de la vegetacioacuten de ahiacute su escasa cobertura vegetal En general se recomienda mejo-rar la fertilidad del suelo y reducir la pendiente con la tierra vegetal o mediante otras medidas ecotecnoacute-logicas antes de hidrosembrar La parte superior de los desmontes suelen tener una banda que frecuen-temente estaacute colonizada por vegetacioacuten natural a partir de la cual se produce la colonizacioacuten del talud por lo que se recomienda conservarla y promoverla

Figura 16 Resultados de la peacuterdida de sedimentos bajo los distintos tratamientos ensayados (manta de esparto manta de coco y control)

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Al contrario que el caso anterior la revegetacioacuten de un tramo de la A-92 correspondiente a la zona de Veacutelez Rubio (Almeriacutea) ejecutada por Ferrovial consiguioacute una elevada cobertura vegetal En este caso las principales diferencias fueron hidrosem-brar en otontildeo que es el periacuteodo maacutes adecuado

en esa zona e incrementar previamente la fertili-dad del suelo mediante la aplicacioacuten de estieacutercol El incremento previo de la fertilidad del suelo ha aumentado notablemente el rendimiento de esta teacutecnica en otros lugares como por ejemplo en un tramo de la Nndash4 cercano a Baileacuten

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CAPIacuteTULO 8 Actuaciones para minimizar los efectos sobre la fauna

Juan E Malo y Cristina Mata

I ALCANCE Y CONTENIDOS

La restauracioacuten ecoloacutegica asociada a cualquier ac-tividad humana debe atender no solo a recuperar los aspectos visuales y esteacuteticos de los sistemas naturales alterados sino tambieacuten a los aspectos funcionales de los mismos en los que desempentildea un papel importante la fauna Puede decirse que la conciencia ambiental de la sociedad va evolu-cionando y que a raiacutez de ella se desarrolla una legislacioacuten progresivamente maacutes estricta legisla-cioacuten que condiciona de forma creciente la puesta en marcha de nuevos proyectos Asiacute hace tres deacute-cadas la atencioacuten a los aspectos paisajiacutesticos re-sultaba pionera en nuestra legislacioacuten (veacutease el RD 29941982 de Restauracioacuten de espacios naturales afectados por actividades extractivas) pero hoy en diacutea el espiacuteritu y la letra de nuestras leyes ambien-tales trascienden estos aspectos para abordar la conservacioacuten integral de la naturaleza Como con-secuencia de estas leyes de una mayor conciencia ambiental y del desarrollo teacutecnico en la actuali-dad se presta gran atencioacuten a la minimizacioacuten de los efectos que tienen las infraestructuras sobre la integridad de los ecosistemas Dentro de este marco el alcance del presente capiacutetulo comprende el conjunto de actuaciones aplicadas en carreteras y ferrocarriles para minimizar los efectos sobre la fauna atendiendo al nivel de conocimiento teacutecnico actual (y su aplicacioacuten) y con una atencioacuten priori-taria al mantenimiento de la funcionalidad de los haacutebitats fragmentados durante la fase de funciona-miento del proyecto Esta concrecioacuten de objetivos

que deja de lado medidas correctoras aplicadas en el aacuterea de afeccioacuten directa del proyecto durante la fase de construccioacuten se justifica tanto por las in-evitables limitaciones existentes para la realizacioacuten de este capiacutetulo como por el hecho de que las escalas espaciales y temporales de mayor preocu-pacioacuten para la restauracioacuten de la fauna son precisa-mente la mayor amplitud espacial (todo el entorno del proyecto) y temporal (las deacutecadas en que estaraacute operativa la infraestructura)

La reduccioacuten de los efectos negativos derivados de las carreteras y ferrocarriles sobre la fauna se aborda en el disentildeo y desarrollo de todos los proyectos y los procedimientos de evaluacioacuten de impacto am-biental prestan una atencioacuten destacada a este pun-to No obstante debe destacarse desde el principio la existencia de un sesgo notorio hacia los vertebra-dos terrestres en el disentildeo y aplicacioacuten de actua-ciones de restauracioacuten La falta de conocimientos baacutesicos y maacutes auacuten la praacutectica habitual en ecologiacutea aplicada nos lleva a plantear la inevitable restriccioacuten taxonoacutemica de la informacioacuten que se va a mostrar Si bien los vertebrados terrestres pueden en cier-tas situaciones ejercer como indicadores para otros grupos taxonoacutemicos o hacer de especies paraguas de ellos faltariacuteamos a la realidad si pretendieacutese-mos decir (como se ha hecho con alguna frecuen-cia) que la atencioacuten a los vertebrados es suficiente para asegurar una adecuada evaluacioacuten de impactos (o restauracioacuten) del conjunto de las comunidades animales Por tanto reconociendo la existencia de un amplio campo de mejora futura este capiacutetulo se centra en actuaciones enfocadas a la minimizacioacuten de los efectos de las infraestructuras de transporte sobre los vertebrados

La minimizacioacuten de los efectos sobre la fauna debe atender a las fases de construccioacuten y explotacioacuten de las viacuteas de transporte con evidentes diferencias en su perspectiva temporal Asiacute la fase de cons-truccioacuten de un tramo de carretera o ferrocarril suele durar varios antildeos en los que los impactos puntua-les son de gran intensidad Las medidas correctoras ejecutadas en ella suelen centrarse en la proteccioacuten de haacutebitats o localizaciones concretas formando parte del conjunto de acciones comunes para la proteccioacuten del entorno del proyecto y con reper-cusiones sobre variados factores ambientales Este tipo de actuaciones son de aplicacioacuten frecuente a todo tipo de proyectos y en el caso de las infra-estructuras de transporte su efectividad estaacute muy mediada por el estudio detallado del territorio y la seleccioacuten de alternativas previa a la ejecucioacuten del proyecto En contraposicioacuten con la construccioacuten la

fase de operacioacuten de una viacutea de transporte es mu-cho maacutes larga ya que la mayoriacutea de ellas se pro-yecta con una vocacioacuten de permanencia indefinida Por este motivo cada vez maacutes se atiende a mini-mizar los efectos del proyecto con actuaciones de restauracioacuten enfocadas a mantener la funcionalidad natural del aacuterea a largo plazo Sobre este tipo de medida se centran los proacuteximos apartados dado que su disentildeo y peculiaridades de aplicacioacuten son claramente diferenciadas y propias para la fauna frente a actuaciones maacutes geneacutericas de adecuacioacuten ambiental de las obras como las habitualmente de-sarrolladas durante la construccioacuten de las infraes-tructuras

Por uacuteltimo y con el mismo aacutenimo de enfocarse hacia las actuaciones de disentildeo y aplicacioacuten maacutes comuacuten para la proteccioacuten de la fauna el presente capiacutetulo no trata las medidas tomadas en el entorno adya-cente a la viacutea Si bien las labores de restauracioacuten tra-tadas mayoritariamente en el resto de capiacutetulos de este libro se circunscriben a estas zonas fuertemen-te impactadas durante la fase de obra el objetivo de conservacioacuten de la fauna de un aacuterea atravesada por una carretera o ferrocarril debe enfocarse prin-cipalmente hacia un entorno maacutes distante tratando de asegurar el mantenimiento de las comunidades animales existentes en eacutel

Con estas restricciones en mente los principales objetivos del capiacutetulo se centran en sintetizar el conocimiento maacutes relevante sobre los efectos de las infraestructuras de transporte sobre la fauna y las medidas correctoras propuestas y ensayadas en las uacuteltimas deacutecadas para reducirlos Desde el punto de vista de las propuestas de actuacioacuten se compila y presenta la tipologiacutea de medidas exis-tente acompantildeada de las indicaciones teacutecnicas maacutes relevantes Para terminar se realiza una eva-luacioacuten general de las experiencias acumuladas en este aacutembito de trabajo sentildealando los aspectos positivos y negativos maacutes importantes derivados de la aplicacioacuten de estas actuaciones asiacute como las perspectivas de investigacioacuten actuales En la medida de lo posible en el texto se han incluido referencias a casos desarrollados en la Peniacutensula Ibeacuterica que pueden ser de maacutes faacutecil aplicacioacuten por el lector o en su defecto las maacutes recientes o relevantes procedentes de otras partes del mun-do Aparte de las referencias presentes al final del capiacutetulo el lector dispone del apartado de lsquoBi-bliografiacutea baacutesica y enlacesrsquo al final del libro en el que aparecen las principales fuentes documen-tales para el disentildeo y aplicacioacuten de este tipo de actuaciones

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Las infraestructuras lineales generan de modo direc-to e indirecto los cinco tipos de efectos reconocidos como principales amenazas para la conservacioacuten de la biodiversidad peacuterdida y degradacioacuten de haacutebitats frag-mentacioacuten de poblaciones mortalidad de individuos e introduccioacuten de especies (Meffe y Carroll 1997 Forman y Alexander 1998 Forman et al 2003 Coffin 2007) Estos efectos adquieren distinta relevancia entre siacute y en las distintas fases de vida de las infraestructuras de transporte y han recibido una atencioacuten dispar tanto en la investigacioacuten como en la propuesta de medidas destinadas a la restauracioacuten de las aacutereas afectadas por la construccioacuten de carreteras y ferrocarriles

El efecto maacutes inmediato derivado de la construccioacuten de cualquier infraestructura viaria es la peacuterdida de haacutebitats que conlleva un inevitable descenso en la capacidad de carga del sistema y por tanto del tamantildeo de las po-blaciones ligadas a estos enclaves (Lodeacute 2000 Fahrig 2002) Pese a la reducida anchura de la plataforma de las infraestructuras (14 m en liacuteneas de alta velocidad y aproximadamente 25 m en autoviacuteas) su gran longitud lleva a que el aacuterea total finalmente ocupada sea muy grande Ademaacutes durante el proceso de construccioacuten es necesario acondicionar para el trabajo un aacuterea mucho maacutes amplia y en todo caso resulta necesario antildeadir las superficies que inevitablemente se transforman en des-montes y terraplenes como consecuencia directa de la interseccioacuten del perfil de la traza con el terreno natural Por este motivo es frecuente asumir que la elimina-cioacuten de haacutebitats como consecuencia de la construccioacuten de una carretera se aproxima a los 100 m de anchura (Forman y Deblinger 2000) Dado que el entorno afec-tado directamente por las obras pero no ocupado por la infraestructura y sus elementos accesorios se puede recuperar de forma maacutes o menos completa tras su fina-lizacioacuten este tipo de efectos se asocia de modo priori-tario a la fase de construccioacuten pero resulta permanente al menos en el aacuterea de ocupacioacuten directa de la carretera o la liacutenea feacuterrea

En segundo lugar se produce una degradacioacuten de haacutebitats derivada de una serie de perturbaciones (cambios en las condiciones que determinan los pa-raacutemetros vitales de las especies) ligadas a la activi-dad humana y la intensidad del traacutefico Entre aque-llas resultan especialmente destacables el ruido las emisiones de gases la contaminacioacuten lumiacutenica el aumento de los niveles de contaminantes en el sue-lo y el aumento de la accesibilidad humana al terri-torio (veacuteanse las revisiones de Forman y Alexander 1998 Forman et al 2003 y Coffin 2007) La distancia

de afeccioacuten dependeraacute del tipo de viacutea la intensidad de traacutefico y la especie en cuestioacuten pudiendo variar en la mayoriacutea de los casos entre 100 y 500 m si bien para especies maacutes sensibles se han descrito efectos a maacutes de 1000 m (Forman y Deblinger 2000 Nelle-mann et al 2003 Jaeger et al 2005) En su conjunto este tipo de efectos multiplica el aacuterea de afeccioacuten de las infraestructuras y se refleja en una disminucioacuten auacuten mayor del aacuterea efectivamente utilizable por las especies poco tolerantes a la perturbacioacuten humana yo una reduccioacuten de la densidad en el entorno de la infraestructura Como contrapartida se debe in-dicar que las especies maacutes tolerantes a la actividad humana pueden verse beneficiadas en esta aacuterea ya sea de forma directa por la existencia de recursos (pe especies carrontildeeras) como por efectos indi-rectos mediados por la disminucioacuten de las especies menos tolerantes (sean estas competidoras o de-predadoras) Como resultado las infraestructuras ejercen de corredores para las especies antropoacutefilas La degradacioacuten del entorno ocurre tanto durante la construccioacuten como en la explotacioacuten del proyecto y aunque los efectos sean maacutes agudos en la fase de construccioacuten debe tenerse en cuenta que los efec-tos croacutenicos del funcionamiento de la infraestructura se extenderaacuten durante toda su vida uacutetil

El tercer grupo de efectos se asocia a la fragmen-tacioacuten de los haacutebitats disectados por la viacutea enten-diendo aquella como la subdivisioacuten en fragmentos de menor tamantildeo y con ciertas dificultades de conexioacuten entre siacute (Bascompteacute y Soleacute 1996) La fragmentacioacuten de haacutebitats conlleva la de aquellas poblaciones asen-tadas en ellos lo que se refleja en poblaciones de menor tamantildeo y relativamente desconectadas entre siacute (Haila 2002 Mcgarigal y Cushman 2002) Resulta con-veniente indicar que la fragmentacioacuten se caracteriza y distingue de la destruccioacuten y degradacioacuten de haacutebitats por los dos efectos particulares recieacuten mencionados el menor tamantildeo de las poblaciones sustentadas en cada tesela de haacutebitat aumenta su probabilidad de extincioacuten local (por efecto del azar) y la disminucioacuten de la conectividad conlleva la disminucioacuten de la pro-babilidad de recolonizacioacuten desde aacutereas proacuteximas junto con la posible aparicioacuten de efectos geneacuteticos negativos para la supervivencia de la poblacioacuten Aun-que se ha debatido acerca de la relevancia de la frag-mentacioacuten y hasta queacute punto se debe favorecer la co-nectividad en la actualidad existe el consenso de que la fragmentacioacuten puede ser incluso maacutes perjudicial para la salud del ecosistema atravesado por una in-fraestructura que la propia destruccioacuten y degradacioacuten

de haacutebitats (Robinson et al 1992 Lindenmayer et al 1999 Fahrig 2003)

El cuarto grupo de efectos tambieacuten vinculados a la fase de explotacioacuten deriva de un inevitable incremen-to de la mortalidad por atropello de la fauna silvestre Las carreteras o ferrocarriles pueden actuar como un sumidero para las poblaciones proacuteximas a la infraes-tructura pudiendo llegar a constituir una seria amena-za para especies de poblaciones reducidas y con bajas tasas de reproduccioacuten (Ferreras et al 1992 Forman y Alexander 1998) Este tema ha suscitado gran aten-cioacuten mediaacutetica y cientiacutefica tanto por la fuerza visual y emocional de la presencia de animales atropellados en las carreteras como por las implicaciones econoacute-micas y sociales que tiene (Romin y Bissonette 1996 Malo et al 2004) Este problema empieza a preocupar tambieacuten para el caso de los trenes de alta velocidad habieacutendose publicado recientemente una monografiacutea sobre el particular (Rodriacuteguez et al 2008)

Por uacuteltimo la construccioacuten de infraestructuras facili-ta la expansioacuten de especies invasoras a lo largo de ellas ya que se ven favorecidas por el haacutebitat alte-rado presente en el entorno de la viacutea Aunque desde la biologiacutea de la conservacioacuten se acostumbra a dar un tratamiento especiacutefico a este problema concep-tualmente se podriacutea englobar como un subtipo de degradacioacuten de haacutebitat con la salvedad de que las especies favorecidas en este caso no se encontraban presentes en el ecosistema con anterioridad La gra-vedad de los efectos que aparecen frecuentemente vinculados a las especies exoacuteticas puede justificar su tratamiento independiente pero parece adecua-do no profundizar aquiacute en esta discusioacuten (de valor meramente acadeacutemico) y siacute remarcar que el efecto corredor para las especies invasoras de las infraes-tructuras lineales se ha descrito en algunas ocasio-nes (Pauchard y Alaback 2004 Barbosa et al 2010)

1 Revisioacuten del conocimiento existente y de las praacutecticas de restauracioacuten desarrolladas

Los muacuteltiples efectos derivados de la construccioacuten y posterior explotacioacuten de las infraestructuras lineales de transporte son una constante preocupacioacuten que des-de el campo de la biologiacutea de la conservacioacuten se ha conseguido trasladar al campo teacutecnico y de toma de decisiones lo que ha conducido a la elaboracioacuten de numerosos documentos teacutecnicos En el contexto espa-ntildeol la primera Guiacutea metodoloacutegica para la elaboracioacuten de Estudios de Impacto Ambiental (Suaacuterez 1989) supuso todo un hito en este aacutembito recogiendo las primeras propuestas para minimizar los impactos de ferrocarriles

II EFECTOS DE LAS INFRAESTRUCTURAS SOBRE LOS VERTEBRADOS y carreteras Posteriormente en la deacutecada de los noven-ta con la incorporacioacuten de medidas correctoras en los nuevos proyectos de infraestructuras se siguioacute avan-zando en el estudio de los impactos generados por estas y se elaboraron dos guiacuteas en las que se recogiacutean un amplio abanico de medidas correctoras destinadas a minimizar estos impactos (Velasco et al 1995 Rosell y Velasco 1999) En la misma liacutenea se han continuado publicando guiacuteas praacutecticas destinadas a mejorar el di-sentildeo de estas medidas como la desarrollada a escala europea por Iuell et al (2005) fruto de la Accioacuten COST 341 A escala nacional destacan las lsquoPrescripciones teacutecnicasrsquo para el disentildeo de pasos de fauna y vallados perimetrales elaboradas por el Ministerio de Medio Am-biente (2006) asiacute como la monografiacutea sobre pasos de fauna publicada por el CEDEX en la que se combinan resultados derivados del seguimiento de estas medidas con indicaciones de disentildeo (Hervaacutes et al 2006)

Sobre la base de estos documentos y con atencioacuten prioritaria a las indicaciones teacutecnicas maacutes modernas y contrastadas a continuacioacuten se presenta una reco-pilacioacuten de las principales actuaciones desarrolladas para evitar la fragmentacioacuten de poblaciones por las infraestructuras lineales En dicha recapitulacioacuten se presentan ademaacutes las recomendaciones teacutecnicas maacutes relevantes en cuanto a disentildeo y puesta en marcha

En liacuteneas generales y de forma muy simplificada se puede realizar una primera clasificacioacuten de estas me-didas correctoras distinguiendo dos tipologiacuteas baacutesicas a) en funcioacuten de su ubicacioacuten respecto a la viacutea (inferior frente a superior) y b) dependiendo del disentildeo (exclu-sivo para la fauna frente a mixto con uso humano) No obstante la diferenciacioacuten de tipos es mucho maacutes pro-lija tal y como se detalla a continuacioacuten Mencioacuten apar-te requieren los cerramientos perimetrales que ejercen una funcioacuten complementaria y a su vez imprescindible para el correcto funcionamiento de estos pasos

Figura 1 Cabras montesas (Capra pyrenaica subsp hispanica) paci-endo en los bordes de la carretera A-92 Sierra Nevada (Granada)

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III TIPOLOGIacuteA DE LAS MEDIDAS CORRECTORAS

1 Cerramiento perimetral

El cerramiento perimetral (vallado) de las infraestruc-turas es en la actualidad obligatorio para todas las liacuteneas feacuterreas (nuevas o antiguas habilitadas para velocidades superiores a 160 kmh) las viacuteas de alta capacidad (autoviacuteas y autopistas) y algunas carrete-ras convencionales (pe en entornos urbanos) y se realiza puntualmente en otras carreteras convencio-nales El principal objetivo del vallado es impedir la presencia de personas o animales de gran tamantildeo (ganado principalmente) en la viacutea que suponen un grave riesgo para los vehiacuteculos y sus ocupantes en caso de colisioacuten Por este motivo el vallado tradicio-nal soliacutea consistir en una malla de luz relativamente amplia y aproximadamente de 15 m de altura

Debido al incremento de las poblaciones de ungu-lados silvestres y en un intento de reducir el nuacute-mero de atropellos de animales de menor tamantildeo los vallados actuales son maacutes altos resistentes e impermeables a la fauna silvestre Las principales recomendaciones en este sentido se concretan en

bull La altura debe ser superior a 18 m y en caso de existir poblaciones de ciervo en el entor-no elevarse hasta los 2 m En lugares con topografiacutea irregular se debe vigilar el manteni-miento de estas cotas respecto de los puntos desde los que los animales puedan saltar

bull La extensioacuten del vallado en altura mediante una visera suele justificarse como meacutetodo de impedir el escalamiento por personas y para dificultar el salto de los ceacutervidos Desgracia-damente se ha comprobado que los ciervos pueden quedar enganchados por las cuernas (al descorrear principalmente) y morir en es-tas estructuras Por este motivo en caso de colocarse visera es recomendable situarla ha-cia el interior de la infraestructura (Figura 2A)

bull Durante la instalacioacuten se debe prestar atencioacuten a que no queden huecos debidos a la topogra-fiacutea irregular del terreno o a una deficiente unioacuten con estructuras como los pasos inferiores

bull La parte inferior del vallado debe evitar que la atraviesen animales de menor tamantildeo lo que se consigue mediante el uso de mallas de luz progresiva yo con la utilizacioacuten de una malla accesoria en los 50-100 cm inferiores del

vallado (Figura 2B) En ocasiones maacutes pun-tuales (pe alrededor de charcas de criacutea) se utilizan vallas macizas de diversos materiales para evitar el acceso de anfibios y reptiles a las carreteras (Figura 3A)

bull La parte inferior de la malla debe anclarse o enterrarse en el suelo de modo que se dificul-te en lo posible la apertura de pasos bajo ella (pe por los conejos) o el levantamiento de la valla (tejoacuten jabaliacute) Ademaacutes puede dificultar la apertura de huecos por la escorrentiacutea En el caso de zonas con presencia de jabaliacute suele recomendarse un enterramiento de 30-40 cm o complementarse con un cementado de la base de la malla (Figura 3B)

Figura 3 Ejemplos de buenas praacutecticas en cerramientos vallado es-pecial para evitar el acceso de anfibios a la calzada (A) ubicado en un tramo conflictivo por el paso estacional de anfibios en la carretera M-618 (Madrid) y detalle de vallado enterrado en la base (B) en la autopista AP-51 en la provincia de Aacutevila

En todo caso el mantenimiento del vallado es vi-tal para asegurar que no pierda eficacia ya que la generacioacuten de huecos por los propios animales ac-cidentes con salida de la viacutea o las condiciones am-bientales resulta inevitable La deteccioacuten de estas alteraciones en el vallado puede hacerse durante la vigilancia rutinaria del entorno coincidiendo con las tareas de limpieza o tras detectarse el atropello de animales de mediano o gran tamantildeo en la calzada

La presencia del cerramiento y su adecuacioacuten para ha-cerlo impermeable a la fauna tienen un posible efecto negativo si un animal consigue entrar en la infraestruc-tura le seraacute extraordinariamente difiacutecil salir de ella Tal y como se ha mencionado anteriormente el manteni-miento en perfecto estado del vallado es complejo por lo que praacutecticamente siempre quedaraacute alguna gatera o hueco por el que pueda entrar un animal Ademaacutes toda carretera vallada posee en cada enlace con otra

viacutea de menor entidad tantas aperturas en el vallado como entradassalidas de vehiacuteculos tenga por lo que la presencia esporaacutedica de animales dentro del cerra-miento es inevitable En consecuencia los vallados ac-tuales al menos en lugares sensibles para la fauna disponen de dispositivos de escape que permiten el paso en un solo sentido (hacia el exterior) de los ani-males que se encuentren en la infraestructura

En los uacuteltimos antildeos se han instalado multitud de dispositivos de este tipo en las nuevas infraestruc-turas habieacutendose ensayado dos tipos principales puertas y rampas de escape La eficacia de estas me-didas debe estar determinada por dos factores fun-damentales su disentildeo y ubicacioacuten si bien hasta el momento son escasas las investigaciones en las que se haya comprobado su efectividad para permitir la salida de los animales que accidentalmente se han internado en la viacutea (porcentaje de eacutexito tiempo de salida etc veacutease no obstante Cuadro 1) Siacute se han evaluado algunos elementos clave de su funcionali-dad en infraestructuras en las que se han instalado y existen observaciones maacutes o menos sistemaacuteticas que han permitido actualizar las recomendaciones sobre su disentildeo respecto a las primeras propuestas

Las puertas o portillos de escape consisten en es-tructuras incluidas en el vallado y disentildeadas de modo que los animales puedan abrirlas en el sen-tido de salida de la infraestructura pero no en el contrario Los modelos maacutes habituales consisten en una estructura de una sola hoja basculante formada por un marco rectangular con las bisagras ubicadas en su parte superior Este tipo de disentildeo se ha reali-zado en dimensiones variables desde apenas 25 cm de lado hasta 180 m de alto siendo poco recomen-dable utilizar tamantildeos demasiado angostos para la mayor parte de las especies o tan grandes que el peso de la puerta impida su apertura a la praacutectica totalidad de las especies En todo caso los portillos de escape tienen dos problemas de mantenimiento que deben valorarse adecuadamente las piezas moacute-viles requieren un engrasado perioacutedico para conser-var su funcionalidad y la hierba crecida en la parte baja de la puerta debe eliminarse para evitar el atas-co de la estructura Para este uacuteltimo fin en ocasio-nes se cementa la superficie sobre la que se apoya la puerta Por uacuteltimo las puertas de varillas flexi-bles (de movimiento horizontal) que se ensayaron inicialmente para facilitar la salida de los ceacutervidos (Velasco et al 1995) se encuentran desaconsejadas tras comprobarse que estos animales aprenden a abrirlas en sentido contrario y las usan rutinaria-mente para acceder a los bordes de la carretera en los que alimentarse

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Figura 2 Tipos de cerramientos recomendados vallado de 2 m de altura con visera hacia el interior (A) dispuesto en un tramo del Tren de Alta Velocidad Madrid-Sevilla (Toledo) y vallado reforzado en la base (B) en un tramo de la autoviacutea A-66 (Leoacuten)

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En liacuteneas generales la utilizacioacuten de dispositivos moacuteviles (pe puertas basculantes) se recomienda uacutenicamente para especies de tamantildeo medio y pe-quentildeo (Figura 4A) y solo si se realizan labores de mantenimiento de forma regular

El segundo tipo de estructura recomendado actual-mente como mejor opcioacuten son las rampas de esca-pe De modo simplificado se trata de estructuras de relleno que facilitan el acceso de los animales a la parte alta del vallado con el objetivo de que puedan saltar al exterior El caraacutecter unidireccional de dichas estructuras se consigue realizando el relleno en un solo lado del vallado lo que suele obligar a sustituir en ese punto la valla metaacutelica por una estructura riacutegida que soporte la carga del montiacuteculo de tierra (o ramas) que forma la plataforma de ascenso hasta la parte alta del cerramiento Las primeras estructu-ras de este tipo que se establecieron consistiacutean en rampas de apenas 40-50 cm de ancho construidas con ladrillos yo tableros cuya funcionalidad se ha puesto en duda para especies medianas y grandes Por este motivo actualmente suelen realizarse en forma de rampas de tierra apoyadas sobre un muro adosado al interior del vallado (Figura 4B)

Cuadro 1 Efectividad de los dispositivos de escape para ciervos (Bissonette y Hamer 2000)

En las carreteras de Utah (Estados Unidos) donde la presencia de ceacutervidos en la calzada era relativamente frecuente se realizoacute un estudio para evaluar la efectividad de dos tipos de dispositivos de escape las rampas de escape de tierra frente a las puertas unidireccionales

En dichos estudios se comproboacute coacutemo los ciervos utilizaban entre 8 y 10 veces maacutes las rampas de escape frente a las puertas con la ventaja antildeadida de que las rampas apenas requieren mantenimiento

Los autores recomiendan la instalacioacuten de este tipo de rampas cada 400 m en lugares con elevada concentracioacuten de atropellos y cada 800 m en el resto

Finalmente existen dos recomendaciones que se con-sideran claves para facilitar que un animal accidental-mente entrado en la viacutea y que no dispone de infor-macioacuten aprendida sobre ella pueda utilizar los dispo-sitivos de escape En primer lugar solo si la estructura de escape se encuentra ubicada en una querencia del animal (punto en el que de forma natural el animal va a buscar refugio o intentar huir) es previsible que la utilice Por este motivo se sugiere que en la medida de lo posible los dispositivos de escape se ubiquen en esquinas del vallado a poder ser en la base de tramos en terrapleacuten en los que la plataforma se encuentra maacutes alta que el propio vallado o en otros puntos que sean previsiblemente direcciones de huida natural de los animales En segundo lugar se recomienda disponer una pequentildea valla de forma perpendicular al cerra-miento que emboque a los animales hacia el punto en que se encuentra el dispositivo de escape

2 Drenajes

Las obras de drenaje trasversal a la viacutea (lsquodrenajesrsquo en adelante) son estructuras imprescindibles en las infra-estructuras lineales y resultan muy numerosas en la mayor parte de las situaciones La necesidad de eva-cuar la escorrentiacutea superficial procedente de las super-ficies de baja capacidad de infiltracioacuten (plataformas taludes) y el hecho de que la traza corte de for-ma repetida el terreno y los flujos de agua naturales obliga a construir obras de drenaje que atraviesen la carretera o la liacutenea feacuterrea a intervalos frecuentemente inferiores a los 500 m Esta distancia es menor cuanto maacutes ondulado es el paisaje atravesado y mayores las

precipitaciones del aacuterea en cuestioacuten Dado el caraacutecter de estructuras lsquofuncionales de la viacutearsquo (necesarias por motivos intriacutensecos a la construccioacuten de la infraestruc-tura) y muy abundantes son las candidatas principales para ejercer un papel relevante en la permeabilizacioacuten para la fauna de las carreteras y ferrocarriles como han demostrado diferentes estudios (Yanes et al 1995 Clevenger et al 2001 Mata et al 2005)

La adaptacioacuten de los drenajes para facilitar su uso por la fauna es por tanto una de las medidas maacutes frecuentemente aplicadas y de mayor potencial des-de una perspectiva de coste-beneficio Ademaacutes su uso por diferentes grupos de vertebrados se ha com-probado incluso en el caso de carreteras sin vallar y traacutefico moderado en las que estos podriacutean cruzar por encima de la plataforma (Ascensatildeo y Mira 2007) La adaptacioacuten de los drenajes pasa por facilitar el acceso de los animales hacerlos maacutes amplios y lu-minosos y evitar que su encharcamiento impida el uso por especies no asociadas a medios acuaacuteticos

Las principales recomendaciones son

bull Salvo en situaciones excepcionales (pe tra-mos largos en trinchera) todas las estructuras de este tipo deben construirse de lado a lado del vallado evitando la existencia de drenajes internos al vallado

bull La revegetacioacuten en torno a las embocaduras es-pecialmente los laterales de las entradas debe disentildearse de modo que minimizando el riesgo de obstruir el drenaje se favorezca la aproxi-macioacuten de las especias maacutes reacias (pe con la plantacioacuten tanto de herbaacuteceas como de matorra-les en los laterales de modo que ofrezcan cober-tura a las distintas especies hasta la misma boca de la estructura actuando a modo de embudo)

bull El vallado debe servir para dirigir los animales hacia estos puntos lo que puede requerir un refuerzo de la base con malla de luz reducida o en aacutereas sensibles de anfibios la utiliza-cioacuten de un vallado especial En estos casos se recomienda un vallado opaco de paredes lisas y al menos de 40 cm de alto que sirva de estructura guiacutea e impida su acceso a la calzada (Figura 2)

bull Los accesos deben resultar sencillos y el re-corrido previsto de los animales tener una continuidad adecuada evitando el cruce de cauces canales escalones o saltos Con fre-cuencia las entradas o salidas de los drenajes

deben pavimentarse o cubrirse de cantos de modo que se impida la erosioacuten del sustrato a la vez que se dispone de una superficie por la que los animales pueden acceder

bull Las dimensiones miacutenimas recomendadas para la seccioacuten de los drenajes son 2 x 2 m Se recomienda sobredimensionar estas estructuras (tradicionalmente se utilizaban cantildeos de (50-60 cm) para reducir el efecto tuacutenel de modo que la anchura del paso de-beraacute aumentarse si la longitud es mayor El iacutendice de apertura (Cuadro 2) recomendado en drenajes es de 01-05 si bien valores de 004-006 se consideran adecuados para los anfibios

bull La existencia de una apertura intermedia que deacute algo de luz al drenaje en general una ar-queta con rejilla por la que evacuacutean las cune-tas ubicadas en la mediana de las autoviacuteas se considera positiva para el uso por la fauna

bull Se recomienda que la seccioacuten de los drenajes tenga la base plana ya que la altura que al-canza el agua en momentos con escorrentiacutea es muy inferior De hecho en este tipo de estructura la existencia de una superficie de paso en seco o con apenas un par de cen-tiacutemetros de agua es frecuente a lo largo de praacutecticamente todo el antildeo

bull En los casos en que se prevea el encharcamien-to maacutes o menos continuo de la obra de drenaje (arroyos permanentes ubicacioacuten en aacutereas en-charcadizas) se recomienda la disposicioacuten de banquetas laterales que aseguren la existencia de paso en seco (Figura 5) La efectividad de estas estructuras se ha comprobado incluso en lugares en que se han construido a posteriori

Figura 5 Drenaje adecuado con banquetas laterales (TAV Madrid Barcelona tramo en la provincia de Guadalajara)

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Figura 4 Dispositivo de escape para tejones en una autoviacutea hol-andesa (arriba) y rampa de escape en un tramo de la provincia de Caacuteceres en la autoviacutea A-66 (abajo)

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Cuadro 2 Iacutendice de apertura

El iacutendice de apertura (IA) de una estructura transversal a una infraestructura es un indicador comuacutenmente utilizado para establecer las dimensiones recomendables para asegurar el uso por la fauna Este iacutendice relaciona la seccioacuten de la estructura con su longitud de modo que permite ajustar el ancho de los pasos en funcioacuten de la longitud que deben tener en razoacuten del tipo de infraestructura y las condiciones locales de su ubicacioacuten (Olbrich 1984) Su amplia aceptacioacuten proviene de que este paraacutemetro puede servir como un indicador (inverso) del efecto tuacutenel presuntamente percibido por las especies al utilizar las estructuras inferiores a la viacutea (Clevenger et al 2005 y Hervaacutes et al 2006)

El iacutendice de apertura se definioacute originalmente para las estructuras inferiores a la viacutea como

IA pasos inferiores = seccioacutenlongitud

Figura 6 Ejemplos de caacutelculo del iacutendice de apertura en dos drenajes de diferente seccioacuten drenaje circular (izquierda) y drenaje adecuado (derecha)

No obstante tambieacuten ha sido adaptado para los pasos superiores para los cuales se ha establecido como una relacioacuten entre el ancho del paso y la longitud de este

IA pasos superiores = anchuralongitud

Por uacuteltimo las obras de drenaje transversal requie-ren un mantenimiento adecuado para no perder su funcionalidad como pasos de fauna En este sentido debe destacarse la propensioacuten a que se acumule basura en ellos arrastrada por el agua desde las cu-netas de la carretera principalmente Igualmente es frecuente el depoacutesito de sedimentos y consecuente embalsado de agua en el lado inferior como resulta-do de la peacuterdida de velocidad del agua a la salida de la obra de faacutebrica Ambos hechos pueden condicio-nar el uso por la fauna por lo que deben ser objeto de atencioacuten entre las tareas de mantenimiento

3 Pasos inferiores multifuncionales

Igual que en el caso anterior este tipo de pasos es inherente a toda infraestructura viaria estando

disentildeados para reponer caminos o pistas intersec-tadas por la viacutea Su frecuencia estaacute muy relacionada con la intensidad de uso humano y la estructura de la propiedad del territorio siendo maacutes frecuentes en zonas agriacutecolas y en las que la propiedad estaacute muy fragmentada lo que aumenta el nuacutemero de este tipo de estructuras presentes antes de construirse la infraestructura Debido a su menor coste de cons-truccioacuten en comparacioacuten con los pasos superiores las reposiciones de caminos se proyectan bajo la ca-rretera o el ferrocarril maacutes frecuentemente que sobre ellos excepto en paisajes muy llanos

Unas miacutenimas labores de adecuacioacuten de estas es-tructuras contribuyen a aumentar la permeabilidad de la viacutea facilitando maacutes sitios por los que la fauna puede franquear la infraestructura Entre ellas cabe destacar

bull Se recomienda el solado de tierra ya que los animales de menor tamantildeo rehuacuteyen atravesar superficies grandes de asfalto o cemento (Fi-gura 7A) En los casos en que por el paso dis-curre una carretera asfaltada si el traacutefico por ella no es muy intenso se pueden acondicio-nar uno o ambos laterales de la misma para el paso de los animales mediante el solado de tierra En estos casos se deberiacutea respetar al menos 4-6 m de ancho para el uso animal (Figura 7B)

bull En las aacutereas laterales destinadas al uso ani-mal se pueden disponer tocones o pequentildeos acuacutemulos de piedras que sirvan de refugios naturales para favorecer la utilizacioacuten de estos pasos por pequentildeos vertebrados Con cierta frecuencia es posible aprovechar la presencia de un regato o del drenaje lateral para faci-litar esta funcioacuten aprovechando la tendencia natural de mucho animales a desplazarse si-guieacutendolos

bull Se recomienda que el iacutendice de apertura se encuentre en el rango 06-15 y en aacutereas con poblaciones de ungulados disentildear los pasos siempre para que alcancen valores de iacutendice de apertura de 15 o superiores

bull Uno de los problemas maacutes frecuentemente detectados en los pasos inferiores de tipo mixto es la presencia de accesos comple-jos yo poco acordes con los patrones de

movimiento habitual de los animales En general los accesos maacutes faacuteciles para los animales son aquellos perpendiculares a la viacutea (idealmente con visioacuten del otro lado del paso) sin tramos largos en trinchera profun-da y que mantienen cierta coherencia con las formas del paisaje natural (idealmente en vaguada)

bull La proximidad de la vegetacioacuten en las embo-caduras puede facilitar el paso de animales lo que debe tenerse en cuenta al disentildear la revegetacioacuten del entorno

bull Por facilidad de construccioacuten y menor coste los pasos inferiores de seccioacuten rectangular (lsquocajonesrsquo) realizados mediante encofrado in situ se pueden sustituir por estructuras abo-vedadas construidas a partir de piezas pre-fabricadas La decisioacuten uacuteltima debe tomarse en funcioacuten de las condiciones locales de de-sarrollo del proyecto y de los costes relativos de distintas soluciones manteniendo en todo caso el iacutendice de apertura prescrito para la estructura

Un aspecto del mantenimiento que requieren estas estructuras consiste en evitar que el ancho antildeadido para el uso por la fauna se transforme en lugar de vertido incontrolado de residuos de construccioacuten o de caraacutecter domeacutestico tanto mediante una vigilan-cia adecuada como retirando los desechos que se detecten

Figura 7 Pasos inferiores multifuncionales con adaptaciones para favorecer su uso por la fauna con aacutereas revegetadas a ambos lados del camino en una autoviacutea holandesa (A) y un paso con solado de tierra ubicado en un tramo de la provincia de Guadalajara del TAV Madrid-Barcelona (B)

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4 Pasos superiores multifuncionales

Los puentes construidos para restituir la comuni-cacioacuten entre caminos rurales y carreteras locales interrumpidos por el trazado de la infraestructura pueden ser acondicionados tambieacuten para favorecer su uso por la fauna En general este tipo de estruc-tura es mucho menos utilizada por la fauna que los pasos inferiores multifuncionales con la excepcioacuten de los pasos superiores ubicados en puntos en que la infraestructura discurre en desmonte En estas situaciones la longitud del paso superior suele ser relativamente corta y puede coincidir con puntos frecuentemente utilizados para sus desplazamien-tos por los animales Este uacuteltimo caso suele darse en las pequentildeas lomas cubiertas de vegetacioacuten le-ntildeosa que hay con cierta frecuencia en los terrenos ondulados

Las propuestas de adaptacioacuten de estos pasos son similares a las presentadas anteriormente para los pasos inferiores multifuncionales con un par de in-dicaciones propias de ellos

bull Las dimensiones miacutenimas de estas estructu-ras deben respetar un ancho de por lo menos 10 m y un iacutendice de apertura de 08

bull Se debe minimizar en lo posible la longi-tud de los accesos que deben recorrer los animales por un medio abierto y de es-tructura no natural Si es posible deprimir la rasante de la infraestructura facilita el disentildeo de accesos maacutes cortos y con menor pendiente

bull La revegetacioacuten de las superficies sobre los pasos superiores estaacute muy condicionada por la cantidad de suelo que se puede acumular y tanto maacutes cuanto maacutes aacuterido sea el clima Por ello se debe calcular la estructura de modo que pueda soportar un espesor miacutenimo de tierra de 30 cm si se pretende realizar planta-ciones herbaacuteceas y de 60 cm para mantener vegetacioacuten arbustiva

Ademaacutes es posible aplicar otras recomendaciones propias de los pasos superiores especiacuteficos (pe pantallas laterales opacas) para mejorar el potencial de uso por la fauna (Figura 8)

5 Pasos inferiores especiacuteficos para la fauna

Los pasos inferiores especiacuteficos para la fauna son estructuras que discurren por debajo de la viacutea y cuyo objetivo principal al ser disentildeadas es facilitar los des-plazamientos naturales de los animales a traveacutes de la infraestructura Con cierta frecuencia tienen tambieacuten una utilidad para el drenaje y de hecho la presencia de un canal o regato en ellas puede favorecer su uso por la fauna En estos casos las dimensiones de la estructura no se condicionan por las necesidades de avenamiento sino por las previsibles exigencias de los animales a los que se orienta

Desde el punto de vista estructural se han cons-truido como cajones encofrados in situ boacutevedas de piezas prefabricadas y como pequentildeos puentes de vigas prefabricadas o de losa pretensada siendo

este disentildeo el maacutes habitual (Figura 9) No existe constancia alguna de que uno u otro disentildeo sea maacutes apropiado por lo que el tipo a construir dependeraacute de las condiciones concretas del proyecto La uacuteni-ca indicacioacuten a este respecto es que si se disentildean como puentes se debe evitar (o minimizar) que las juntas generen ruidos fuertes al paso de los vehiacute-culos Se ha comprobado que estos ruidos pueden alterar el comportamiento de los animales en los pasos y aunque no impiden su utilizacioacuten se teme que reduzcan su eficiencia como medida correctora

bull Sus dimensiones deben alcanzar al menos 10 m de ancho y 4 m de altura y en la medi-da de lo posible ser maacutes amplias que estos miacutenimos y dar continuidad a la topografiacutea de la vaguada en que se instalen

bull Dado que ejercen una funcioacuten fundamental en la permeabilizacioacuten de las infraestructuras para los grandes vertebrados su iacutendice de apertura debe superar el valor de 15 esta-blecido como miacutenimo para el uso por ungu-lados

bull En todo caso el solado debe ser de tierra evitaacutendose tanto los sustratos artificiales como el relleno con grava u otros materiales de construccioacuten

bull La revegetacioacuten de los accesos tiene que fa-cilitar la aproximacioacuten de los animales a las embocaduras dando continuidad a los haacutebi-tats que haya en el entorno Para atraer la fauna al entorno de los pasos se recomienda la instalacioacuten de elementos de intereacutes para la misma como charcas o majanos cerca de las embocaduras

bull La revegetacioacuten dentro del paso se ve muy limitada por las condiciones de sombra y se-quedad impuestas por su techo No obstan-te debe facilitarse en lo posible (pe bajo puentes con apertura central junto a un ca-nal de drenaje) el crecimiento de la vegeta-cioacuten al menos herbaacutecea y la lsquonaturalizacioacuten del pasorsquo se puede complementar con la co-locacioacuten de ramas o tocones de aacuterbol en el interior

bull El uso humano y la ocupacioacuten de los pa-sos para diferentes actividades debe evi-tarse mediante una combinacioacuten de ba-rreras adecuadas (pe grandes piedras) y una vigilancia efectiva (Cuadro 3 Figura 9)

bull El procedimiento y tipo de construccioacuten igual que en los pasos inferiores multifuncionales puede decidirse en funcioacuten de las condiciones concretas del proyecto

Figura 8 Dos tipos de adaptaciones para favorecer el traacutensito de la fauna por los pasos superiores multifuncionales la colocacioacuten de tocones de madera (A) y la revegetacioacuten de los laterales (B) Ambos ejemplos proceden de autoviacuteas holandesas

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Figura 9 Distintos disentildeos de pasos inferiores especiacuteficos tipo puente de tableros (A) y abovedado (B)

Las indicaciones generales que se dan para este tipo de estructuras son

bull Se debe cuidar de modo muy preciso su ubi-cacioacuten a fin de maximizar las probabilidades de eacutexito una vez instalados

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Cuadro 3 Uso humano de los pasos especiacuteficos para la fauna

Entre los problemas maacutes frecuentemente detectados en los pasos superiores e inferiores especiacuteficos para fauna se encuentra su utilizacioacuten humana Las actividades humanas detectadas en ellos son extraordinariamente frecuentes y abarcan desde su uso rutinario como lugares para cruzar la infraestructura hasta la apropiacioacuten para diferentes usos

La mayor parte de los pasos construidos para el uso por la fauna acaban siendo utilizados tambieacuten por el hombre en sus desplazamientos Este uso suele incluir siempre el cruce esporaacutedico de peatones pero no es extrantildeo incluso el establecimiento de pistas permanentes en ellos En Espantildea solo en torno a un 45 de los pasos inferiores y un 30 de los pasos superiores de las estructuras disentildeadas especiacuteficamente para fauna disponen de alguacuten tipo de impedimento para evitar el traacutensito de vehiacuteculos

El uso peatonal siempre que no sea intensivo puede considerarse poco relevante para la efectividad de los pasos ya que la mayor parte de los ecosistemas ibeacutericos se encuentran maacutes o menos humanizados y la fauna resulta tolerante a esta coincidencia con el hombre si bien se recomienda controlar la actividad humana en ellos (Clevenger y Waltho 2000) Sin embargo el seguimiento de pasos muestra que es frecuente el uso de los pasos por vehiacuteculos agriacutecolas o de campo (motos quads Figura 10A) que pueden sortear los impedimentos que se ponen a los vehiacuteculos De hecho en algunos lugares en que se habiacutean colocado grandes piedras para dificultar el paso de vehiacuteculos estas aparecen desplazadas labor relativamente sencilla si se dispone de un tractor Por tanto este tipo de uso solo puede ser evitado mediante una vigilancia adecuada y la sancioacuten del uso indebido

Mencioacuten aparte merecen el establecimiento de actividades humanas como el almacenaje de materiales (agriacutecolas de construccioacuten) o el estabulamiento de animales en el interior de los pasos (Figura 10B) Esta ocupacioacuten ilegal del dominio puacuteblico y la perturbacioacuten del uso para el que fueron disentildeados los pasos resulta de todo punto inapropiada y debe perseguirse como parte de las tareas de seguimiento o mantenimiento de las infraestructuras Otro tanto podriacutea decirse del establecimiento de pistas permanentes atravesando los pasos superiores o inferiores originalmente disentildeados para su uso por la fauna

Figura 10 Usos inadecuados que comprometen la efectividad de los pasos inferiores especiacuteficos traacutensito de vehiacuteculos (A) y aprovecha-miento del paso como establo (B)

6 Pasos superiores especiacuteficos para la fauna

Los pasos superiores especiacuteficos son de un modo geneacuterico puentes sobre la infraestructura lineal cuya razoacuten de ser no consiste en permitir el cruce de un camino o carretera sino el de un (supuesto) camino natural de la fauna (Cuadro 4) Bajo esta premisa se han ensayado diferentes tipos de paso superior especiacutefico que pretenden adecuar las caracteriacutesticas de los puentes destinados al uso humano para las peculiaridades de su uso previsto Las principales diferencias nacen de la necesidad de establecer cier-ta cantidad de vegetacioacuten sobre la estructura de un intento de reducir el efecto tuacutenel que pueden per-cibir los animales en el paso y de una disminucioacuten de la perturbacioacuten del paso por el traacutefico que circula bajo eacutel

Las recomendaciones que maacutes comuacutenmente se ha-cen para los pasos superiores especiacuteficos son

bull Como en todos los pasos especiacuteficos se debe prestar una atencioacuten detallada a la ubicacioacuten de modo que se ajuste lo maacutes posible a la existencia de esas rutas propias de los anima-les que se pretende reponer

bull La anchura miacutenima recomendada para estas estructuras es de 20 m no siendo infrecuen-tes dimensiones hasta el doble de este valor pese a su elevado coste

bull El iacutendice de apertura miacutenimo recomendado es de 08 (Cuadro 2)

bull A fin de reducir el efecto tuacutenel que pueden percibir los animales se suelen disentildear con planta en forma de diaacutebolo de modo que la anchura miacutenima se reduce al aacuterea central y los animales tienen una visoacuten maacutes amplia de la salida del paso independientemente del punto por donde lo esteacuten cruzando (Figura 11A)

bull Los accesos deben disentildearse de modo que los perfiles finales sean similares a los del entorno evitando la presencia de pendientes muy pronunciadas que dificulten la visioacuten y el caminar de los animales (Figura 11B)

bull Para atraer la fauna al entorno de los pasos se recomienda la instalacioacuten de elementos de intereacutes para la misma tales como charcas o majanos en los accesos o su entorno

bull Los laterales del paso deben cubrirse con pantallas opacas de 2 m de altura para redu-cir la perturbacioacuten que afecta al aacuterea de uso por los animales principalmente las luces de los coches y el ruido Dichas pantallas suelen construirse mediante tablones o en forma de petos de cemento

bull La revegetacioacuten debe procurar cobertura su-ficiente para que los animales reduzcan su desconfianza a cruzar la infraestructura tanto en los accesos como en el propio paso

bull El grosor miacutenimo de tierra vegetal que debe tener el paso en su parte superior es de 03 m en caso de utilizar plantaciones herbaacuteceas y de 06 m para arbustos

bull En los casos en que no se establezca una cobertura arbustiva en el paso es posible fa-cilitar refugios para la fauna a lo largo del paso acumulando tocones u otros elementos similares

bull Finalizada la construccioacuten deben retirarse to-dos los materiales sobrantes y se deben elimi-nar los caminos utilizados durante la obra para minimizar la frecuentacioacuten humana del paso

bull En todo caso es importante restringir la posi-bilidad de acceso de vehiacuteculos al paso tanto mediante la prohibicioacuten expresa como insta-lando impedimentos a la circulacioacuten Para ello es frecuente la instalacioacuten de grandes piedras espaciadas entre siacute de modo que permitan el paso de los animales pero no de los vehiacuteculos

Entre las recomendaciones anteriores y como ca-racteriacutestica propia de los pasos superiores especiacute-ficos construidos en zonas de clima seco o aacuterido merece la pena comentar brevemente el problema de las revegetaciones La existencia de un periacuteodo prolongado de sequiacutea hace que el mantenimiento de vegetacioacuten lentildeosa en los pasos se encuentre muy limitado por la profundidad del suelo y el agua que puede retener Este hecho se combina con la com-plejidad teacutecnica (y el coste) de realizar estructuras capaces de soportar voluacutemenes de tierra grandes Por ello la posibilidad de realizar plantaciones le-ntildeosas sobre los pasos especiacuteficos es reducida y se encuentra limitada a las situaciones maacutes oacutepti-mas (puentes reforzados para soportar una mayor carga climas subhuacutemedoshellip) En todo caso dado que en los ecosistemas mediterraacuteneos es frecuente la existencia de zonas abiertas el problema no es

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tan grave y la experiencia muestra que los pasos superiores especiacuteficos descubiertos de vegetacioacuten lentildeosa pueden ser utilizados por gran nuacutemero de especies Por tanto en la mayor parte de los casos puede ser maacutes apropiado asumir que la vegetacioacuten sobre el paso va a tener caraacutecter herbaacuteceo (no asiacute los accesos) y disentildear las plantaciones lentildeosas del paso y su entorno de acuerdo con ello

Un elemento maacutes que puede favorecer el uso por la fauna de los pasos superiores especiacuteficos y que se ha observado aunque no experimentado es el esta-blecimiento tras la construccioacuten de plantaciones her-baacuteceas atractivas para los animales Asiacute en Espantildea se ha visto que tanto los lagomorfos como los ungu-lados pueden verse atraiacutedos a los pasos especiacuteficos por la plantacioacuten en ellos de especies pratenses en especial si se mantienen verdes y con porte desarro-llado tras el agostamiento de los pastos naturales del entorno En paralelo en Australia se ha comprobado que el riego durante la estacioacuten seca de los pasos sir-ve para atraer hasta ellos a gran nuacutemero de especies de los ecosistemas adyacentes pudiendo facilitar el uso por los animales de la nueva estructura

Figura 11 Pasos superiores especiacuteficos paso en forma de diaacutebolo construido en un tramo en la provincia de Palencia en la autoviacutea A-231 (A) y otro paso ubicado en el tramo leoneacutes de la autoviacutea A-66 en el que se pueden observar como los accesos son tendidos para favorecer su uso por la fauna (B)

Cuadro 4 Ubicacioacuten de los pasos especiacuteficos para la fauna

Maacutes allaacute de las caracteriacutesticas de la estructura por la que los animales se vean forzados a cruzar las infraestructuras lineales valladas la frecuencia de utilizacioacuten de los pasos de fauna (en sentido amplio) se encuentra estrechamente determinada por las caracteriacutesticas del entorno en que se ubica De nada sirve instalar una estructura especialmente disentildeada para la fauna en un punto al que los animales no pueden acceder por la existencia de impedimentos ajenos a la infraestructura o si las condiciones de haacutebitat del entorno hacen altamente improbable la aproximacioacuten de los animales al mismo Por ambos motivos la ubicacioacuten de estructuras especiacuteficamente disentildeadas para la fauna inevitablemente infrecuentes y con un coste econoacutemico elevado debe tener en cuenta las condiciones del entorno a escala amplia y de detalle La ubicacioacuten de los pasos de fauna en aacutereas que desde una perspectiva espacial amplia sean las maacutes adecuadas para una futura utilizacioacuten por los animales enlaza directamente con la idea de corredores regionales de fauna definidos como las aacutereas de maacutexima probabilidad de uso por un conjunto de taxones para sus desplazamientos por el territorio teniendo en consideracioacuten la existencia de aacutereas nuacutecleo o de maacuteximo intereacutes de conservacioacuten (pe sitios o haacutebitats Red Natura 2000) que alojan las poblaciones a conectar En los uacuteltimos antildeos se han desarrollado de forma intensa los meacutetodos formales de anaacutelisis del territorio desde este punto de vista basados en el uso de sistemas de informacioacuten geograacutefica Aunque dichos sistemas se apoyan en un sustento teoacuterico no del todo comprobado se considera que a diacutea de hoy los modelos de conectividad son la mejor aproximacioacuten posible para la definicioacuten de corredores con una perspectiva amplia (regional o comarcal) Los meacutetodos aplicables son muacuteltiples y el Ministerio de Medio Ambiente y Medio Rural y Marino ha publicado recientemente unas prescripciones acerca de los miacutenimos a tener en cuenta en este sentido en las fases de planificacioacuten y trazado de las infraestructuras (MARM 2010)

Cuadro 4 Ubicacioacuten de los pasos especiacuteficos para la fauna (Continuacioacuten)

Con perspectiva maacutes local a la escala de anteproyecto o proyecto de construccioacuten de una infraestructura la eleccioacuten de la ubicacioacuten y tipo concreto de paso de fauna a instalar debe basarse en una combinacioacuten de anaacutelisis de detalle del entorno combinada con un muestreo de la fauna que utiliza el aacuterea Por una parte los pasos de fauna deben instalarse en los puntos en que aparece el haacutebitat preferido por las especies objetivo siendo necesaria una evaluacioacuten de detalle del mismo (a escala 15000 o superior) Ademaacutes este anaacutelisis tiene que ser complementado con la evaluacioacuten en campo de los haacutebitats de intereacutes y la inexistencia de impedimentos para el movimiento de los animales Asiacute la existencia de vallados muy impermeables entre fincas o el grado de desarrollo de la vegetacioacuten arboacuterea y arbustiva no pueden evaluarse de modo adecuado sin la realizacioacuten de trabajo de campo

A la hora de decidir a pequentildea escala la ubicacioacuten y tipologiacutea de un paso de fauna se pueden tener en cuenta las caracteriacutesticas del paisaje que condicionan el movimiento de los animales Se sabe que la topografiacutea condiciona los desplazamientos de modo que los recorridos que suelen realizar los animales reflejan una combinacioacuten de la optimizacioacuten entre la distancia a recorrer y la facilidad de movimiento en el recorrido En este contexto evitar la existencia de pendientes grandes resulta evidente pero no lo es tanto que los animales acaben utilizando el entorno de los fondos de valle y las hombreras de las lomas en parte precisamente como respuesta al mismo proceso De hecho la sabiduriacutea popular (cinegeacutetica principalmente) apunta a que las vaguadas son en general maacutes utilizadas por la fauna que las partes altas y ello puede apoyar la eleccioacuten prioritaria de la solucioacuten lsquopaso inferiorrsquo en situaciones en que sea posible elegir entre la ubicacioacuten de una estructura sobre o bajo la viacutea No obstante otra parte muy relevante de las claves que usan los animales para desplazarse por el territorio depende de elementos maacutes o menos evidentes del haacutebitat lo que aconseja hacer una prospeccioacuten visual intensiva de los haacutebitats del entorno asiacute como una buacutesqueda de trochas y evidencias del uso por vertebrados a la hora de decidir acerca de la (elevada) inversioacuten en un paso especiacutefico para la fauna

7 Ecoductos

Los ecoductos son estructuras construidas sobre la viacutea para facilitar el cruce de la fauna y que por sus caracteriacutesticas se asemejan a un tuacutenel (Figura 12A) De hecho su principal diferencia con los pasos su-periores especiacuteficos es que sus grandes dimensio-nes y la capacidad de establecer vegetacioacuten sobre ellos permiten una oacuteptima integracioacuten en el entorno Dado el elevadiacutesimo coste de estas estructuras en ellas son de aplicacioacuten la praacutectica totalidad de las indicaciones presentadas anteriormente para los di-ferentes tipos de estructuras adecuadas a la fauna y de modo destacado

bull Su ubicacioacuten debe ser especialmente estudia-da y debe asegurarse una continuidad ade-cuada del futuro corredor de fauna con los haacutebitats del entorno

bull Su anchura miacutenima debe ser de al menos 80 m siendo deseable ampliar este valor en la medi-da de lo posible a fin de asegurar la existencia

de cierta cantidad de haacutebitat poco perturbado en el aacuterea central del paso

bull Se deben disponer pantallas opacas de unos 2 m de altura en los laterales del paso

bull El aislamiento respecto del ruido del traacutefico debe asegurarse mediante motas de tierra la-terales de al menos 1 m de altura

bull La revegetacioacuten debe orientarse a reconstruir haacutebitats muy similares a los existentes en el entorno habieacutendose definido como groso-res miacutenimos de tierra vegetal a utilizar 03 m para plantaciones herbaacuteceas 06 m para arbustos y 15 m para aacuterboles

bull Se recomienda realizar plantaciones heterogeacute-neas sobre el ecoducto (Figura 12B) con es-pacios abiertos en los sectores centrales para que los animales tengan buena visibilidad del extremo contrario del paso y plantaciones maacutes densas de aacuterboles y arbustos en los laterales

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Figura 12 Ecoducto de tipo falso tuacutenel construido en un tramo de la provincia de Caacuteceres de la autoviacutea A-66 (A) Y detalle de la revegetacioacuten realizada en el interior del paso (B)

La teacutecnica de construccioacuten maacutes habitual consis-te en la generacioacuten de falsos tuacuteneles mediante la construccioacuten de boacutevedas y su cubricioacuten posterior si bien la utilizacioacuten de teacutecnicas de construccioacuten de tuacuteneles seriacutea maacutes deseable allaacute donde sea posible para minimizar los impactos sobre el aacuterea En rela-cioacuten con la teacutecnica de construccioacuten debe tenerse en cuenta que la instalacioacuten de falsos tuacuteneles obli-ga a acumular temporalmente grandes voluacutemenes de material de relleno y necesita el desarrollo de obras muy impactantes con abundante maquina-ria pesada en el lugar de la construccioacuten Ambos hechos deben tenerse en cuenta a la hora de pla-nificar una de estas estructuras en especial si van a ubicarse en lugares de alto valor natural Como contrapartida en algunas ocasiones los falsos tuacute-neles sirven como ubicacioacuten para el vertido de ma-teriales excedentes de otras partes (proacuteximas) del trazado en especial cuando se disentildean en paisajes llanos en los que el falso tuacutenel no se ubique en el lugar en que anteriormente existiacutea una loma

Una uacuteltima recomendacioacuten se centra en la necesi-dad de asegurar la pervivencia a largo plazo de la funcionalidad del ecoducto y su mantenimiento al margen de actividades humanas impactantes Para ello idealmente estas estructuras deberiacutean ubicarse siempre en terrenos cuya integridad a largo plazo pueda asegurarse y de modo prioritario sobre zonas de propiedad puacuteblica que aseguren el mantenimien-to de un aacuterea superior a la habitual de expropiacioacuten Otras aacutereas potencialmente interesantes pueden ser grandes fincas sin vallados interiores y que por su utilizacioacuten (pe caza mayor) permitan suponer que no se van a dividir En todo caso deberiacutean esta-blecerse normas para asegurar que el ecoducto y su entorno se mantengan libres de perturbacioacuten de forma maacutes o menos permanente

8 Viaductos

Los viaductos son estructuras de grandes dimen-siones que sirven para que la infraestructura atra-viese vaguadas del terreno y que regularmente se han exigido durante la construccioacuten de carreteras y ferrocarriles para afectar miacutenimamente las aacutereas atravesadas y para facilitar la conectividad del te-rritorio Hasta hace relativamente poco tiempo no se habiacutea registrado cientiacuteficamente su nivel de per-meabilidad para la fauna (Kusak et al 2009) que responde a la percepcioacuten de ellos como estructuras muy permeables y por lo tanto altamente reco-mendables

En el disentildeo y ejecucioacuten de los viaductos cuando se persigan objetivos de conservacioacuten debe prestarse atencioacuten prioritaria a la conservacioacuten de los haacutebitats situados bajo la estructura La construccioacuten de estas estructuras requiere el acceso y trabajo de la maqui-naria pesada como miacutenimo en los puntos en que se asientan las pilas De hecho si no hay indicaciones en contra el procedimiento rutinario de construc-cioacuten pasa por la realizacioacuten de viacuteas de servicio bajo el futuro viaducto que alcanzan la mayor parte de la superficie del mismo Por este motivo cuando se pretende proteger los haacutebitats que van a quedar bajo el viaducto suele exigirse

bull La construccioacuten de la plataforma mediante teacutecnicas miacutenimamente invasivas del fondo del valle (cimbras autoportantes o tableros empu-jados) aunque ello represente un sobrecoste relevante

bull La limitacioacuten en el nuacutemero o ubicacioacuten de los apoyos

bull El trabajo independiente desde ambos lados del valle de modo que se respete la integri-dad del riacuteo y la vegetacioacuten de ribera circun-dante prohibiendo especiacuteficamente la cons-truccioacuten de pistas o vados temporales que los afecten

Aunque las dimensiones de los viaductos suelen ser grandes sobrepasando holgadamente las necesida-des detectadas por los caacutelculos hidraacuteulicos es fre-cuente el establecimiento de indicaciones como

bull El respeto de los cauces la vegetacioacuten de ri-bera y un entorno general de 10 m de los lu-gares de mayor valor siempre que sea posible

bull Nunca ubicar estribos de los viaductos o pilas en el cinturoacuten de vegetacioacuten de ribera ni a menos de 5 m de eacutel

bull Mantener siempre que sea posible una altu-ra tal que no se rompa la continuidad de la vegetacioacuten de ribera y en ninguacuten caso una altura sobre el suelo inferior a 5 m en caso de vegetacioacuten herbaacutecea o arbustiva y 10 m en zonas arboladas

Ya que los viaductos junto a los tuacuteneles son los uacutenicos tramos en que se mantiene la continuidad del paisaje atravesado por la infraestructura en ellos y su entorno se deben extremar las medidas de vigilancia y control de los usos del suelo con el objetivo uacuteltimo de preservar su adecuacioacuten para la fauna Dado que en estas aacutereas son de aplicacioacuten las

normas sobre expropiacioacuten de terrenos y control de actividades en el entorno de infraestructuras existen mecanismos para segurar la consecucioacuten de dicho objetivo

9 Otros

Pasos aeacutereos entre aacuterboles para especies arboriacutecolas

Este tipo de dispositivos se han construido y com-probado su eacutexito para los marsupiales arboacutereos de Australia (Taylor y Goldingay 2009) En Espantildea se recomienda su utilizacioacuten en aquellos lugares donde existan poblaciones de ardilla si bien se ha compro-bado coacutemo estas especies tambieacuten pueden utilizar pasos inferiores adaptados para la fauna y espe-cialmente aquellos de disentildeo especiacutefico (Figura 13)

Figura 13 Ardilla roja cruzando por un paso inferior especiacutefico de la autoviacutea A-40 (Cuenca)

IV EacuteXITOS Y FRACASOS

Ante este conjunto de actuaciones propuestas y desde la perspectiva obtenida tras varias deacutecadas de experiencias internacionales en este aacutembito sur-gen diversas preguntas que merece la pena plantear en este punto iquestse puede considerar exitosa la apli-cacioacuten de las medidas correctoras de la fragmenta-cioacuten de haacutebitats por infraestructuras lineales presen-tadas iquestqueacute evidencias existen de su efectividad La contestacioacuten de estas preguntas de forma sinteacutetica si bien con una inevitable peacuterdida de matices se aborda en los siguientes paacuterrafos Paacuterrafos en los que se pretende mostrar el gran avance que se ha producido en Espantildea en el campo de la restaura-cioacuten ecoloacutegica de los efectos de fragmentacioacuten ge-nerados por las infraestructuras lineales y algunas

lagunas existentes auacuten hoy A fin de tener una visioacuten relativamente completa del tema se abordan las tres perspectivas que delimitan la puesta en marcha de soluciones reales a un problema en el que conflu-yen aspectos administrativos teacutecnicos y cientiacuteficos

En primer lugar debe destacarse que en el plano ad-ministrativo y formal de los procesos de evaluacioacuten de impacto ambiental (EIA) a que se someten los proyectos de nuevas infraestructuras se ha integra-do de forma bastante soacutelida la atencioacuten al problema de la fragmentacioacuten de poblaciones fauniacutesticas Y en este plano se estaacuten dando pasos en la direccioacuten adecuada Asiacute las administraciones ambientales en general y el Ministerio de Medio Ambiente y Medio

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Rural y Marino en particular llevan antildeos exigiendo la adopcioacuten de medidas contra la fragmentacioacuten de haacutebitats en las declaraciones de impacto ambiental (DIA) de carreteras y ferrocarriles Ademaacutes se han publicado una serie de documentos con intencioacuten prescriptiva en los que se sientan las bases de coacutemo actuar correctamente durante las fases de planifica-cioacuten construccioacuten y explotacioacuten de las viacuteas (MMA 2006 MMARM 2008 y MMARM 2010) Dichos docu-mentos estaacuten siendo aplicados caso por caso a los nuevos proyectos sometidos a EIA de forma que la exigencia de su uso en las DIA resulta equivalente para cada proyecto individual a la existencia de una norma superior que los hiciese prescriptivos para to-dos los proyectos El uacuteltimo documento ademaacutes se enfoca tambieacuten a las fases de planificacioacuten someti-das a evaluacioacuten ambiental estrateacutegica

Como contrapunto a este optimismo deben sentildea-larse al menos dos elementos que atantildeen a la aten-cioacuten desde las Administraciones a la fragmentacioacuten de poblaciones por las nuevas infraestructuras de transporte Por un lado la experiencia de las uacuteltimas dos deacutecadas muestra que el avance en este tema no es continuo ni puede darse ya por consolidado definitivamente Asiacute algunos proyectos relativamen-te nuevos se han desarrollado con una atencioacuten a la fragmentacioacuten de poblaciones inferior a la que se habiacutea aplicado (por la misma Administracioacuten) a casos anteriores El hecho de que el tratamiento se desarrolle caso a caso y dependiente de la redac-cioacuten de la DIA correspondiente hace que todos los sectores involucrados deban mantenerse vigilantes ante la aprobacioacuten de nuevos proyectos Por otro

lado cada vez se detecta con mayor intensidad la necesidad de reforzar los procedimientos de vigilan-cia y seguimiento de los proyectos aprobados ya que auacuten son frecuentes cambios sobrevenidos en estos incluso el ahorro de partidas destinadas a me-didas correctoras En este sentido deben destacarse la falta de recursos de las Administraciones ambien-tales para desarrollar adecuadamente el control ne-cesario y la praacutectica inexistencia de procedimientos formales de seguimiento a largo plazo

En segundo lugar desde una perspectiva teacutecnica se puede decir que las publicaciones referidas anterior-mente sirven de instrumento uacutetil para la redaccioacuten de los proyectos La acogida de este tipo de docu-mentos es en general buena como lo viene siendo desde la primera publicacioacuten espantildeola sobre el tema (Velasco et al 1995) En este plano los retos que se enfrentan para el futuro consisten por un lado en una adecuada aplicacioacuten de las prescripciones teacutec-nicas a cada caso concreto evitaacutendose la aplicacioacuten de las indicaciones existentes en estos documentos como recetas uacutenicas y definitivas En concreto la reduccioacuten de costes en la elaboracioacuten de los proyec-tos lleva incluso a omitir las ineludibles visitas de campo que deberiacutean guiar el disentildeo de detalle de las medidas correctoras de la fragmentacioacuten de po-blaciones de fauna Por otro lado auacuten es escasa la integracioacuten de los equipos ambientales y de disentildeo durante la gestacioacuten de los proyectos que permitiriacutea optimizar el trabajo y con cierta frecuencia se le otorga poca importancia al trabajo de los teacutecnicos ambientales durante el desarrollo de los proyectos En este uacuteltimo campo no obstante se ha avanzado mucho en los uacuteltimos antildeos

En tercer lugar la experiencia cientiacutefica acumulada en los uacuteltimos antildeos permite asegurar que el esfuerzo desarrollado por administraciones y teacutecnicos no es en balde en general las actuaciones propuestas sir-ven para la funcioacuten baacutesica para la que se disentildearon el cruce de las infraestructuras por los vertebrados De forma resumida se puede decir que en los luga-res en que se ha realizado un seguimiento cientiacutefico de las estructuras transversales a la viacutea se ha detec-tado el cruce de la praacutectica totalidad de las especies de vertebrados presentes en el entorno (Yanes et al 1995 Rodriacuteguez et al 1996 Rosell et al 1997 Peris y Morales 2004 Mata et al 2005 Mata et al 2006 Ascensatildeo y Mira 2007 Mata 2007 Grilo et al 2008 Llorente y Diacuteez 2008)

En general las estructuras transversales a las infraes-tructuras lineales resultan complementarias entre siacute en cuanto a los animales que las utilizan para cruzar

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ratonesturoacuten

gato

tejoacuten

zorro

perro

jineta

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Figura 15 Representacioacuten graacutefica en la que se sintetizan los resultados procedentes del seguimiento de 113 estructuras de la autoviacutea A-52 Se muestra la ubicacioacuten relativa en un plano obtenida mediante teacutecnicas multivariantes de ordenacioacuten de las especiesgrupos fauniacutesticos en relacioacuten con su utilizacioacuten de los diferentes tipos de pasos DA drenaje adecuado DC drenaje circular PIE paso inferior especiacutefico PIM paso inferior multifuncional PSE paso superior especiacutefico PSM paso superior multifuncional (Fuente figura adaptada de Mata 2007)

Figura 14 Jabaliacute (Sus scrofa) atropellado en la carretera N-110 (Aacutevila)

(Figura 15) La fauna que utiliza los diferentes tipos de pasos es distinta reflejando cierta relacioacuten directa entre el tamantildeo del animal y las dimensiones de las estructuras utilizadas (Veenbass y Brandjes 1999 Ng et al 2004 Mata et al 2005) Asiacute los drenajes son preferentemente utilizados por pequentildeos musteacutelidos anfibios reptiles y micromamiacuteferos (ratones musa-rantildeas y topillos) mientras que los pasos superiores e inferiores maacutes amplios son con mayor frecuencia

utilizados por musteacutelidos medianos como la garduntildea y el tejoacuten asiacute como por conejos y liebres jinetas zo-rros lobos y ungulados (jabaliacute corzo y ciervo)

Por otra parte la frecuencia relativa de uso de los diferentes tipos de estructuras es bastante similar con excepcioacuten de los drenajes de seccioacuten redonda que muestran iacutendices de uso inferiores al resto de tipos de paso (Figura 15)

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Figura 15 Utilizacioacuten relativa de cada tipo de estructura por la fauna representada mediante iacutendices de uso relativo (iacutendice de uso = 1 cuando la utilizacioacuten observada = utilizacioacuten esperada) Los resultados proceden del seguimiento de 113 estructuras de la autoviacutea A-52 DA drenaje adecuado DC drenaje circular n nuacutemero de estructuras controladas PIE paso inferior especiacutefico PIM paso inferior multifuncional PSE paso superior especiacutefico PSM paso superior multifuncional (Fuente figura adaptada de Mata 2007)

Una mencioacuten especial merecen los pasos especiacutefi-camente disentildeados o adaptados para la fauna ya que se ha comprobado su capacidad para facilitar el cruce de especies que no lo hacen por otras estructuras siendo especialmente llamativo para el caso de los ungulados Son numerosos los pro-gramas de seguimiento desarrollados en Espantildea en los que ha quedado reflejado el escaso nuacute-mero de registros obtenidos para estas especies que parecen cruzar de forma muy esporaacutedica las infraestructuras y que lo hacen de forma praacutectica-mente exclusiva a traveacutes de pasos especiacuteficamen-te disentildeados para la fauna (Rodriacuteguez et al 1996 Rosell et al 1997 Navas y Rosell 2002 Mata et al 2006 Llorente y Diacuteez 2008) Ademaacutes en teacuterminos generales se ha comprobado coacutemo la frecuencia de uso de los pasos especiacuteficos es entre 15 y 3 veces mayor en los de disentildeo especiacutefico para la fauna frente a los de tipo funcional de la viacutea de si-milar ubicacioacuten respecto a la infraestructura (Mata et al 2008)

En el contexto de la Peniacutensula Ibeacuterica mencioacuten especial requiere otra especie que se muestra renuente a utilizar los pasos de fauna la tortuga mora Por el momento en el uacutenico seguimiento realizado en una autoviacutea que atravesaba aacutereas con presencia de esta especie no se constatoacute ninguacuten cruce (Botella P comentario personal)

En su conjunto los resultados obtenidos hasta el momento indican que los pasos especiacuteficamente di-sentildeados para la fauna y las estructuras funcionales propias de la viacutea (drenajes puentes y pasos inferio-res) contribuyen a incrementar la permeabilidad de las infraestructuras manteniendo asiacute la conectividad del paisaje En concreto un elemento clave para ase-gurar el eacutexito de estas medidas es la incorporacioacuten de adaptaciones para favorecer su uso por la fauna en todas o buena parte de las estructuras funciona-les de una viacutea suponiendo un sobrecoste que debe ser contemplado como necesario e imprescindible si se pretende reducir la fragmentacioacuten de haacutebitats causada por las infraestructuras de transporte

V CONCLUSIONES Y PERSPECTIVAS

En conclusioacuten se puede decir que la restauracioacuten de las aacutereas afectadas por infraestructuras lineales enfocada a minimizar los efectos de la fragmenta-cioacuten de poblaciones animales se encuentra ya bas-tante consolidada y es relativamente exitosa No obstante pecariacuteamos de optimistas si obviaacuteramos la existencia de grandes vaciacuteos en el conocimiento del tema y nos conformaacuteramos con mantener el statu quo actual de conocimiento y actuacioacuten alcanzados tras poco maacutes de 10 antildeos desde la instalacioacuten de los primeros pasos de fauna en ecosistemas medi-terraacuteneos Ecosistemas que ocupan la mayor parte de la Peniacutensula Ibeacuterica y para los que hay escasas experiencias fuera de ella

Asiacute es necesario reconocer que el conocimiento cientiacutefico actual se centra en el uso de las estruc-turas por los vertebrados (y la impermeabilidad del vallado) pero apenas se ha podido analizar auacuten la efectividad real de dichas actuaciones sobre las po-blaciones animales La constatacioacuten de que cierto nuacutemero de individuos de cualquier especie cruza una infraestructura a traveacutes de los pasos de fau-na no asegura que dicho flujo sea suficiente para mantener a largo plazo la viabilidad de las pobla-ciones yo dinaacutemicas de colonizacioacuten-extincioacuten que permitan asegurar la restauracioacuten de una situacioacuten similar a la previa al proyecto (o cuando menos es-table a largo plazo) Es maacutes la praacutectica totalidad de los anaacutelisis realizados hasta el momento no han abordado la distincioacuten individual de los individuos detectados cruzando los ferrocarriles o carreteras lo que complica auacuten maacutes la evaluacioacuten de cuaacutel es la frecuencia de cruce que podriacutea considerarse miacutenima para asegurar la eficacia de la restauracioacuten Con esta perspectiva en los uacuteltimos tiempos se ha empezado a demandar un anaacutelisis detallado de los efectos po-sitivos de los pasos de fauna en el mantenimiento de la conectividad geneacutetica de las poblaciones (Ba-lkenhol y Waits 2009 Corlatti et al 2009) Sin em-bargo la relativa juventud de estas estructuras hace difiacutecil la deteccioacuten de efectos sobre la variabilidad geneacutetica y maacutes auacuten de cambios geneacuteticos con un reflejo directo en las probabilidades de superviven-cia de las poblaciones De hecho auacuten hoy son es-casos los estudios que demuestran la existencia de fragmentacioacuten geneacutetica de poblaciones asociada a la presencia de infraestructuras de transporte (Riley et al 2006 Malo y Mata 2010)

Desde una perspectiva maacutes amplia el objetivo a perseguir deberiacutea trascender el mantenimiento de

poblaciones estables para alcanzar el maacutes ambi-cioso (y difuso) de asegurar la restauracioacuten de las interacciones entre especies y el mantenimiento de unas lsquocondiciones ecoloacutegicas establesrsquo En una pri-mera aproximacioacuten se pretenderiacutea que las medidas de permeabilidad de las infraestructuras consiguie-ran eliminar la barrera que representa el proyecto y desapareciera todo efecto de fragmentacioacuten del ecosistema Este objetivo representa un nivel de am-bicioacuten de la restauracioacuten ecoloacutegica que trasciende el aproximado hasta el momento desde el punto de vista del conocimiento cientiacutefico y deberiacutea abordar-se desde el marco conceptual de la aparicioacuten de un lsquoecosistema emergentersquo en el entorno de la infraes-tructura lineal Este nuevo ecosistema nunca podraacute ser igual al preexistente en el lugar dado el cambio de condiciones que inevitablemente conlleva la pre-sencia y utilizacioacuten de la carretera o la viacutea feacuterrea

Todo ello deriva hacia el segundo gran tema y efec-to de las infraestructuras lineales sobre el territorio la degradacioacuten de haacutebitats Algunas investigaciones recientes muestran la aparicioacuten de efectos muacuteltiples en las poblaciones e interacciones entre especies en estos ecosistemas (pe Goerlitz y Siemers 2007 Francis et al 2009 Ruiz-Capillas et al 2009) que invitan a pensar en la inevitable degradacioacuten de su entorno No obstante partiendo de la necesidad de este tipo de infraestructuras puede ser maacutes uacutetil aproximarse al problema desde una perspectiva po-sitivista (o posibilista) reduacutezcanse los efectos nega-tivos y traacutetese de aprovechar los que puedan llegar a ser positivos En este contexto seriacutea necesario es-clarecer cuaacuteles son los principales cambios en estos ecosistemas emergentes a fin de detectar queacute actua-ciones pueden llevarse a cabo para que la presencia del ecosistema de entorno de la infraestructura en-torpezca en el menor grado posible el funcionamien-to de aquellos otros en los que se inserta

Mientras no dispongamos de un conocimiento ade-cuado para actuar proactivamente en la direccioacuten de manejar dicho ecosistema emergente el sentido comuacuten y la aplicacioacuten del principio de precaucioacuten debe servir para dirigir los esfuerzos encaminados a proteger la fauna afectada por nuestras infraes-tructuras En primer lugar se deben minimizar los efectos del desarrollo de nuevos proyectos tanto en el espacio como en el tiempo mediante una plani-ficacioacuten adecuada de las actuaciones y su ejecucioacuten con las teacutecnicas menos impactantes que resulten factibles Ademaacutes debe trabajarse para conseguir la

DC (n = 42) DA (n = 16) PIM (n = 21) PIE (n = 8) PSM (n = 22) PSE (n = 4)

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maacutexima integracioacuten del nuevo proyecto con el en-torno atendiendo tanto a la fauna como al resto de elementos del medio bioacutetico y abioacutetico que se tratan en este manual Y por uacuteltimo las actuacio-nes que se planteen deben disentildearse ejecutarse y mantenerse con una perspectiva temporal de largo plazo La experiencia proacutexima nos muestra la (des-graciada) frecuencia con la que se ponen en marcha iniciativas bien encaminadas que nunca alcanzan las metas propuestas Y no lo hacen porque el plazo en que estas se alcanzariacutean es muy superior al que tar-damos en hacerlas descarrilar por accioacuten u omisioacuten Asiacute ya se estaacuten dando casos en que estructuras di-sentildeadas para ejercer de pasos de fauna sabiamente ubicadas en supuestos corredores de fauna son re-convertidas como pasos de nuevas carreteras iquestTan necesarias eran dichas estructuras si apenas cinco antildeos despueacutes estamos dispuestos a eliminarlas

Para terminar y mirando hacia el futuro cabe plantearse una nueva cuestioacuten iquestqueacute ocurre con las infraestructuras antiguas Este es un tema

que empieza a plantearse y sobre el que algunos paiacuteses lsquoavanzadosrsquo han empezado a trabajar Tal y como se ha comentado la atencioacuten a los pro-blemas de fragmentacioacuten de poblaciones animales se ha desarrollado en las uacuteltimas deacutecadas y para entonces las redes baacutesicas de carreteras y ferro-carriles ya se encontraban construidas Aunque buena parte de ellas no estaba vallada el efecto de fragmentacioacuten que pueden estar ejerciendo auacuten no ha sido evaluado si bien podriacutea ser destaca-ble (Malo y Mata 2010) Ante esta situacioacuten paiacuteses con mayor experiencia en el desarrollo de infraes-tructuras de transporte (Estados Unidos Holanda) estaacuten iniciando ya programas de desfragmentacioacuten del territorio mediante la aplicacioacuten de teacutecnicas como las que se indicaban en los apartados ante-riores para proyectos nuevos En breve nuestras autoridades ambientales empezaraacuten a trabajar en ello y a largo plazo seraacute necesario invertir en ella el dinero que no se haya invertido acertadamente ahora Y se haraacute con el sobrecoste de toda actua-cioacuten a posteriori

INSECTOS

Este capiacutetulo de fauna recoge la problemaacutetica de los vertebrados un grupo fauniacutestico muy atrac-tivo pero minoritario Desgraciadamente ha quedado fuera el grupo de los invertebrados (in-sectos arantildeas lombrices caracoles etc) cuyo papel en el funcionamiento de los ecosistemas es cuantitativa y cualitativamente mucho ma-yor que el de los vertebrados Esta omisioacuten se debe en gran medida a que solo algunos grupos

nacionales desde fechas muy recientes trabaja en el aacutembito de invertebrados y carreteras no asiacute en otros paiacuteses como en el caso de Finlandia donde se han realizado diversos trabajos

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9Seguimiento y vigilancia ambiental

Carlos Iglesias Santiago Soliveres Valentiacuten Alfaya Jesuacutes Aacutelvarez Ignacio Mola Javier Martiacutenez de Castilla y Xavier Artigas

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CAPIacuteTULO 9 Seguimiento y vigilancia ambiental

Carlos Iglesias Santiago Soliveres Valentiacuten Alfaya Jesuacutes Aacutelvarez Ignacio Mola Javier Martiacutenez de Castilla y Xavier Artigas

I INTRODUCCIOacuteN Y ANTECEDENTES

1 Introduccioacuten y marco general

La vigilancia ambiental en proyectos de infraestruc-turas de transporte se enmarca generalmente en un escenario definido por la evaluacioacuten de impacto ambiental (EIA) de los mismos Salvo en aquellos casos en los que la construccioacuten de una infraestruc-tura nueva no queda sometida a este procedimiento bien porque no corresponda con los previstos en los anexos de la norma correspondiente o maacutes ex-cepcionalmente auacuten quede exenta por una ley del Estado o por un acuerdo del consejo de gobierno de una comunidad autoacutenoma en las situaciones en las que la competencia corresponda a estas uacuteltimas

En el actual marco legislativo los programas de vigi-lancia ambiental (PVA) son documentos de caraacutecter obligatorio dentro del procedimiento de EIA y han de servir para establecer el sistema que garantice el cum-plimiento de las indicaciones y medidas protectoras correctoras y compensatorias si proceden conteni-das en el estudio de impacto ambiental (EsIA) tanto en lo referente a su ejecucioacuten como a su eficacia

El oacutergano ambiental evaluacutea el EsIA del proyecto (en el caso de las infraestructuras de transporte suele coincidir con su fase de estudio informativo) tras haberse sometido a informacioacuten puacuteblica y formula la declaracioacuten de impacto ambiental (DIA) En caso de que la DIA sea positiva fija las condiciones de caraacutecter ambiental que deben incorporarse en la or-den de aprobacioacuten del proyecto traacutemite con el cual

concluye el procedimiento de EIA Estas condiciones suelen establecer medidas adicionales a las previs-tas en el EsIA

Tanto la DIA como el conjunto de documentacioacuten generada durante el procedimiento de EIA se con-vierten en piezas baacutesicas para la redaccioacuten del pro-yecto constructivo ya que debe contemplar lo que establecen e incluir un PVA que sirva para controlar la ejecucioacuten de las obras y al menos los primeros antildeos de funcionamiento

El seguimiento y vigilancia ambiental sin diferenciar entre ambos conceptos se trata en el Real Decreto Legislativo 12008 (BOE nordm 23 de 26 de enero de 2008) modificado por la Ley 62010 (BOE nordm 73 de 25 de marzo de 2010) como se reproduce en el Cua-dro 1 En el Capiacutetulo III dedicado al control del cum-plimiento de la DIA se conciben como la herramienta que permite verificar la aplicacioacuten de las medidas pre-ventivas correctoras y cuando proceda compensato-rias durante la ejecucioacuten y fase de explotacioacuten de un proyecto sometido al procedimiento de EIA

Cuadro 1 Seguimiento y Vigilancia en el RDL 12008

Artiacuteculo 18 Seguimiento y vigilancia del cumpli-miento de la DIA

1 Corresponde al oacutergano sustantivo o a los oacuterganos que en su caso designen las comunidades autoacutenomas respecto de los proyectos que no sean de competencia estatal el seguimiento y vigilancia del cumplimiento de la declaracioacuten de impacto ambiental Sin perjuicio de ello el oacutergano ambiental podraacute recabar informacioacuten de aquel al respecto asiacute como efectuar las comprobaciones necesarias para verificar el cumplimiento del condicionado

2 El oacutergano sustantivo comunicaraacute al oacutergano ambiental el comienzo y el final de las obras asiacute como el comienzo de la fase de explotacioacuten

En la actualidad la legislacioacuten baacutesica en materia de EIA sufre la paradoja de que el Reglamento que la desarrolla el RD 11311988 (BOE nordm 239 de 5 de octubre de 1988) es anterior al RDL 12008 y a la Ley 62010 de modificacioacuten del texto refundido de la Ley de Evaluacioacuten de Impacto Ambiental de pro-yectos aprobado por el citado RDL 12008

La lectura del RD 11311988 permite observar que tampoco en este caso se diferencia entre las ta-reas de seguimiento y vigilancia aunque los ob-jetivos de esta uacuteltima tratan de forma especiacutefica de

1 Velar para que en relacioacuten con el medio am-biente la actividad se realice seguacuten el proyec-to y seguacuten las condiciones en que se hubiere autorizado

2 Determinar la eficacia de las medidas de pro-teccioacuten ambiental contenidas en la declara-cioacuten de impacto

3 Verificar la exactitud y correccioacuten de la evalua-cioacuten de impacto ambiental realizada

Debido a la organizacioacuten administrativa del Estado algunas comunidades autoacutenomas han establecido en sus respectivas normas que el desarrollo de la vigilancia ambiental seraacute responsabilidad de la consejeriacutea competente en materia de medio am-biente como en los casos de Andaluciacutea y Madrid Circunstancia que ha obligado a matizar la redac-cioacuten del artiacuteculo 18 punto 1 del RDL 12008 res-pecto a lo que se contemplaba en el artiacuteculo 25 punto 1 del RD 11311988 (Cuadro 2) auacuten vigente salvo en los aspectos que contradiga al primero y su posterior modificacioacuten No obstante en la ma-yoriacutea de comunidades autoacutenomas como Canarias Castilla-La Mancha Castilla y Leoacuten Cataluntildea Ga-licia etc se ha trasladado el esquema baacutesico de funcionamiento del Estado siendo la verificacioacuten del cumplimiento de la DIA competencia del oacutergano sustantivo sin perjuicio de la facultad del oacutergano ambiental para recabar la informacioacuten que requiera para verificar dicho cumplimiento aunque tambieacuten el desarrollo legislativo ha dado lugar a la creacioacuten de diferentes procedimientos de autorizacioacuten am-biental de proyectos y actividades en algunas auto-nomiacuteas que en funcioacuten de sus caracteriacutesticas o las del emplazamiento del proyecto pueden ocasionar que dicha responsabilidad recaiga sobre el oacutergano sustantivo o sobre el oacutergano ambiental como por ejemplo sucede en Aragoacuten en funcioacuten del tipo de tramitacioacuten que corresponda

Un caso maacutes singular de funcionamiento es el de las Islas Baleares donde su legislacioacuten establece que en funcioacuten del importe del presupuesto del proyec-to o la concurrencia de circunstancias que lo justi-fiquen dicha responsabilidad puede recaer directa-mente sobre una auditoriacutea externa contratada por el propio promotor

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Cuadro 2 Vigilancia y responsabilidad (RD 11311988)

Artiacuteculo 25 Oacuterganos que deben hacerla1 Corresponde a los oacuterganos competentes por razoacuten de la materia facultados para el otorga-miento de la autorizacioacuten del proyecto el segui-miento y vigilancia del cumplimiento de lo esta-blecido en la declaracioacuten de impacto ambiental Sin perjuicio de ello el oacutergano administrativo de medio ambiente podraacute recabar informacioacuten de aquellos al respecto asiacute como efectuar las comprobaciones necesarias para verificar dicho cumplimiento2 El seguimiento y vigilancia por los oacuterganos que tengan competencia sustantiva deben ha-cer posible y eficaz los que ejerzan los oacuterganos administrativos de medio ambiente que podraacuten alegar en todo momento el necesario auxilio administrativo tanto para recabar informacioacuten como para efectuar las comprobaciones que consideren necesarias

Artiacuteculo 26 Objetivos de la vigilanciaLa vigilancia del cumplimiento de lo estableci-do en la declaracioacuten de impacto tendraacute como objetivos a Velar para que en relacioacuten con el medio am-

biente la actividad se realice seguacuten el proyec-to y seguacuten las condiciones en que se hubiere autorizado

b Determinar la eficacia de las medidas de pro-teccioacuten ambiental contenidas en la declara-cioacuten de impacto

c Verificar la exactitud y correccioacuten de la evalua-cioacuten de impacto ambiental realizada

Debido al uso frecuente de acroacutenimos en la materia tratada en este capiacutetulo antes de finalizar el aparta-do de introduccioacuten se considera conveniente incluir el siguiente cuadro resumen

Cuadro 3 Resumen de siglas y acroacutenimos

CMCC Comisioacuten Mixta de Concertacioacuten y Control

DAO Direccioacuten ambiental de obra

DIA Declaracioacuten de impacto ambiental

EIA Evaluacioacuten de impacto ambiental

EsIA Estudio de impacto ambiental

I+D+i Investigacioacuten + Desarrollo + innovacioacuten

PAC Programa de aseguramiento de la calidad

PEM Presupuesto de ejecucioacuten material

PPI Programa de puntos de inspeccioacuten

PS Programa de seguimiento

PVA Programa de vigilancia ambiental

2 Objeto y alcance del capiacutetulo

El presente capiacutetulo pretende no solo establecer las pautas lsquoteacutecnicasrsquo de seguimiento de las distintas varia-bles y elementos ambientales sino tambieacuten proponer un marco maacutes ambicioso para la articulacioacuten de los programas de vigilancia ambiental en proyectos de infraestructuras a partir de las deficiencias habitual-mente detectadas Una articulacioacuten que entre otros objetivos permita aclarar las responsabilidades de los distintos agentes y facilitar que los responsables de cada fase doten los recursos necesarios para una aplicacioacuten eficiente de los programas de vigilancia en obra y seguimiento a largo plazo

Por un lado se entiende que un factor clave para poder implementar un PVA en obra seriacutea que este se iniciase con una revisioacuten exhaustiva del proyecto y la constatacioacuten en campo de la idoneidad de las medidas previstas siempre guiado por el objetivo de buscar los errores defectos y omisiones que el proyecto pudiera tener En este sentido es necesario contemplar protocolos para la definicioacuten de nuevas medidas correctoras ya que asiacute se consigue mante-ner la idea de que el PVA no es un documento ce-rrado durante la ejecucioacuten de las obras de la misma manera que el propio proyecto puede sufrir profun-das modificaciones de aspectos tan relevantes como el trazado enlaces situacioacuten de estructuras etc De este modo en el caso de detectarse alguna caren-cia en los estadiacuteos iniciales la direccioacuten facultativa dispondriacutea de un margen superior de tiempo para reconducir situaciones adversas y adoptar las medi-das que se consideraran oportunas por la asistencia teacutecnica (Gil Esteban 2006)

Por todo ello el objetivo fundamental que tiene este capiacutetulo es proponer un escenario compatible con la legislacioacuten vigente que permita potenciar el papel del seguimiento y la vigilancia ambiental de los proyectos y actividades sometidas a EIA par-ticularmente los de infraestructuras de transporte asiacute como resaltar su complementariedad con los procesos de aseguramiento de la calidad que rea-lizan algunos actores que participan en distintas

fases de su ciclo de vida con el fin uacuteltimo de fo-mentar la retroalimentacioacuten del sistema por medio de un protocolo de funcionamiento basado en la creacioacuten de comisiones multidisciplinares que per-mita exponer y consolidar el conocimiento emana-do de la experiencia acumulada por los antildeos de implantacioacuten de la EIA en Espantildea dado que en la actualidad en todos los aacutembitos afectados se considera deficiente Para lograrlo es necesario di-ferenciar el papel y el significado del seguimiento y la vigilancia contemplados en el actual Reglamento de EIA (RD 1131988) y desarrollar los contenidos y actores intervinientes en cada fase de acuerdo con la distincioacuten baacutesica que se presenta en el Cuadro 5

3 Los PVA en el marco legal Vinculacioacuten con la DIA y el proyecto

Los PVA habitualmente se incorporan al proyecto de construccioacuten en el caso de las infraestructuras de transporte como un capiacutetulo del anejo de Integracioacuten Ambiental (a veces denominado lsquoOrdenacioacuten ecoloacutegi-ca esteacutetica y paisajiacutesticarsquo o similar) en el que se parti-cularizan las medidas disentildeadas atendiendo al condi-cionado de la DIA

Esta disposicioacuten en el Proyecto hace que en oca-siones tanto el anaacutelisis del cumplimiento de la DIA como el disentildeo del PVA se perciban como un tema exclusivamente ambiental reducieacutendose la participacioacuten en su disentildeo y en el de las medidas correctoras de otros teacutecnicos involucrados en la redaccioacuten de los proyectos como podriacutean ser quie-nes elaboran los anejos de geologiacutea geotecnia hidrologiacutea y drenaje etc Por otro lado la misma circunstancia hace que aspectos relevantes de es-tos apartados se diluyan entre los varios centena-res de paacuteginas que pueden ocupar los anejos de integracioacuten ambiental dado el amplio espectro de variables que se tratan en ellos

La aplicacioacuten de estos programas se realiza de ma-nera maacutes o menos exhaustiva durante la construc-cioacuten de la obra con notables diferencias de unos casos a otros pero en general no trasciende al pla-zo de garantiacutea de la misma (normalmente los dos antildeos posteriores a la finalizacioacuten de los trabajos) Por otro lado la dispersioacuten de la informacioacuten en-tre administraciones entre el oacutergano sustantivo y el ambiental asiacute como los dispares procedimientos de adjudicacioacuten de estos trabajos no permiten el acce-so a los resultados consolidaacutendose una situacioacuten de desconocimiento bastante generalizada sobre la consistencia de los PVA y su aplicacioacuten real

Figura 1 Ejemplos contrapuestos sobre la proteccioacuten de pies arboacutereos en distintas obras En la imagen superior se ilustra la ausencia de protecciones (Foto Xavier Artigas) y en la inferior cada ejemplar arboacutereo se encuentra protegido por un cerramiento riacutegido a su vez recubierto por telas que incrementan su visibilidad

En este sentido llama poderosamente la atencioacuten los resultados de una investigacioacuten de Arce et al (2006) basada en un cuestionario remitido a em-presas constructoras y consultoras de Ingenieriacutea en el que un 64 de las primeras manifiesta que siacute se realiza alguacuten tipo de control de las medidas preven-tivas y correctoras mientras que entre las empresas consultoras tan solo responde afirmativamente un

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36 Esto quiere decir que un aspecto fundamental del proyecto desde el punto de vista de su apro-bacioacuten ambiental se ha ignorado sistemaacuteticamente en fase de obras (seguacuten reconoce un tercio de las empresas constructoras y sospechan dos tercios de las empresas redactoras de proyectos)

Es decir en general durante mucho tiempo se ha venido consintiendo una situacioacuten irregular respec-to a la disciplina ambiental es decir la vigilancia y el seguimiento su cumplimiento y la imposicioacuten de sanciones cuando proceda No obstante con el tiem-po tambieacuten se van conociendo iniciativas realmente interesantes para la aplicacioacuten de estos PVA que maacutes adelante se comentaraacuten

Cuadro 4 Principales problemas para la implementacioacuten de los PVA

- Los recursos que se requieren para ejecutar con solvencia el PVA en general no se pre-supuestan con el detalle que corresponderiacutea a cualquier medida que se define en la fase de redaccioacuten de proyecto En ocasiones el contra-tista principal de la obra acaba asumiendo una parte de estos costes

- No existe un seguimiento a maacutes largo plazo de las medidas aplicadas y los aspectos ambien-tales que podriacutea ser fundamental para recabar informacioacuten valiosa sobre la verdadera efecti-vidad de las medidas de revegetacioacuten protec-cioacuten de la fauna etc

- En la praacutectica se diluyen las responsabilidades entre los agentes implicados (promotor oacutergano sustantivo oacutergano ambiental asistencia teacutecni-ca direccioacuten facultativa contratista operador o concesionariohellip) en relacioacuten con la aplicacioacuten de los programas de vigilancia y seguimiento

- El dispar tratamiento de los PVA en fase de pro-yecto (unas veces incluidos en el presupuesto de ejecucioacuten material otras en el de inversioacuten en ocasiones ausentes etc) no contribuye a clarificar las responsabilidades menos auacuten cuando el esquema de participacioacuten se vuelve algo maacutes complejo de lo habitual

Figura 2 En la imagen superior tiacutepico cartel que anuncia unas obras y pide disculpas a los usuarios por las molestias ocasio-nadas durante las mismas que permanece por tiempo indefinido durante la fase de explotacioacuten En la imagen inferior unas panta-llas acuacutesticas tiacutepica medida correctora de impacto ambiental cuya eficacia no podraacute ser verificada hasta la puesta en servicio de la infraestructura (Foto Carlos Iglesias)

Las principales etapas del ciclo de vida de una infra-estructura lineal se resumen en la Figura 3

Estudio baacutesicoEstudio de trazado

Elaboracioacuten delproyecto de

construccioacuten

Ejecucioacuten(construccioacuten)+ garantiacutea

Elaboracioacuten delproyecto baacutesico

EIA

Incorporacioacutenrequisitos DIA

ElaboracioacutenPVA

Operacioacutenconservacioacuten y mantenimiento

Demolicioacuten o deconstruccioacuten

Vigilanciaambiental

Seguimiento alargo plazo

PreliminarPVA

Figura 3 Esquema habitual de la EIA en Espantildea en relacioacuten con los proyectos de las infraestructuras de transporte

Como es sabido la DIA cuando es positiva cons-tituye la autorizacioacuten de la obra a los efectos am-bientales e incluye buena parte de los requisitos que en esta materia seraacuten aplicables Entre otros las condiciones del trazado las principales medidas preventivas y compensatorias los criterios para el disentildeo de las medidas correctoras y en particular los objetivos y exigencias de la vigilancia ambiental

Dichos aspectos sin embargo no siempre son faacuteci-les de trasladar a los PVA debido entre otras cosas a que la fase en que se evacua la DIA es auacuten muy temprana en el disentildeo del proyecto En ese momen-to es difiacutecil tener una idea clara de cuaacuteles van a ser las variables ambientales o las medidas correctoras que requeriraacuten un mayor esfuerzo de monitorizacioacuten en las fases de construccioacuten y operacioacuten

Para orientar la consecucioacuten de los objetivos ex-puestos en este capiacutetulo hacia todas las fases del ci-clo de vida de una infraestructura de transporte y en general de cualquier otro tipo de proyecto sometido a EIA se parte inicialmente de la idea de incluir un anejo especiacutefico en el proyecto por ejemplo deno-minado lsquoCumplimiento de la DIA y vigilancia y segui-miento ambientalrsquo puesto que el cumplimiento del condicionado de la DIA empieza en fase de proyecto afecta a todos sus anejos y se prolonga en obra y durante la fase de explotacioacuten

Este anejo deberiacutea ser coordinado por el autor del proyecto y exclusivamente dedicado a justificar coacutemo

se cumple la DIA en los distintos documentos de un proyecto dado que la definicioacuten de muchas de estas medidas es ajena al anejo de integracioacuten ambiental y contribuiriacutea a implicar al conjunto de los teacutecnicos que participan en la redaccioacuten de un proyecto bajo la responsabilidad de quienes poseen la capacidad de firmarlo Se favoreceriacutea asiacute la coordinacioacuten de un escenario de trabajo efectivamente pluridisciplinar en el que las posibles incoherencias del proyecto se pondriacutean de manifiesto y cada redactor de un ane-jo percibiriacutea la influencia de su trabajo sobre otros apartados Finalmente cuando se iniciara la fase de obras se facilitariacutea el conocimiento de los detalles concretos que afectan a los aspectos de la vigilancia y del seguimiento ambiental respecto a la situacioacuten actual que obliga a indagar entre las decenas de anejos de un proyecto y los centenares de paacuteginas de algunos de ellos

Otro de los objetivos fundamentales de este capiacutetulo del libro reside en la necesidad de homogeneizar y poner de relieve el valor de las tareas de seguimien-to y vigilancia ambiental en obra y durante la fase de explotacioacuten de las infraestructuras de transpor-te poniendo de manifiesto el significado de ambos conceptos y la existencia en ocasiones de activida-des duplicadas que se desarrollan de manera para-lela por diferentes actores sin que exista un flujo de informacioacuten coherente que sirva al sistema para aclarar el estado de conocimiento en las materias en cuestioacuten ni mucho menos conocer los resultados correspondientes a experiencias anteriores

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Cuadro 5 Distincioacuten baacutesica entre vigilancia ambiental y seguimiento ambiental y objetivos fundamentales

1 Vigilancia ambiental fundamentalmente de caraacutecter teacutecnico antes y durante la ejecucioacuten de las obras estariacutea centrada en

bull Detectar y corregir posibles deficiencias del proyecto de construccioacuten

bull Verificar la adecuacioacuten de las medidas proyectadas a la realidad final de la obra

bull Supervisar la correcta ejecucioacuten de las medidas ambientales (pantallas acuacutesticas revegetacioacuten pasos de fauna etc)

bull Controlar los aspectos ambientales relevantes de la obra (pe seguimiento de la calidad de las aguas superficiales afecciones a los haacutebitats silvestres emisiones atmosfeacutericas etc) Y deteccioacuten de impactos no previstos anteriormente

bull Determinar la posible supresioacuten modificacioacuten o introduccioacuten de nuevas medidas preventivas y correctoras conforme al protocolo que contemple el propio pva en ausencia de normas especiacuteficas al respecto

2 Seguimiento ambiental a medio y largo plazo (orientativamente de 3 a 10 antildeos) desde el momento de recepcioacuten de la obra y posteriormente tambieacuten adquiririacutea un sentido cientiacutefico y se centrariacutea en

bull Verificar la evolucioacuten de las medidas implantadas (pe Revegetacioacuten uso de pasos de fauna etc) Para evaluar su eficacia a medio y largo plazo

bull Recabar informacioacuten sobre los impactos de la infraestructura en el medio ambiente (pe Efecto barrera) y la posible aparicioacuten de otros no previstos

bull Informar y servir de input para futuros proyectos en el marco de una continua mejora del procedimiento de eia y de la prevencioacuten y correccioacuten de impactos ambientales en particular

PromotorRedaccioacuten del EsIA (y PVA)Explotacioacuten de la infraestructura

Oacutergano ambiental DIA

Oacutergano sustantivo Vigilancia y seguimiento

Figura 4 Esquema habitual del papel de los oacuterganos ambiental y sustantivo en el modelo de EIA en Espantildea (diferente en algunas comuni-dades autoacutenomas) En el caso de las infraestructuras de transporte suele coincidir que el promotor es a la vez oacutergano sustantivo

II CONTEXTO GENERAL DE LOS PVA EXPECTATIVAS Y DEFICIENCIAS

1 Los PVA en el contexto del ciclo de vida de la infraestructura Agentes implicados

El RDL 12008 establece que corresponde al oacutergano sustantivo (en el caso de infraestructuras de trans-porte puede ser el Estado las autonomiacuteas o incluso algunas diputaciones) el seguimiento y vigilancia del cumplimiento de la DIA o a los oacuterganos que en su caso designen las comunidades autoacutenomas respec-to de los proyectos que sean de su competencia Al situarse en un estatus cuanto menos confuso seguacuten las casuiacutesticas posibilitadas por el tipo de proyecto y las administraciones competentes en la praacutectica la vigilancia queda desligada en cierto modo de la evaluacioacuten puesto que el PVA se redacta en fase de proyecto (dada la escasa definicioacuten posible en el EsIA) lo cual no significa que sea una medida maacutes a ejecutar por el contratista de las obras puesto que este no deberiacutea vigilarse a siacute mismo De estas

consideraciones deriva tambieacuten la conveniencia de segregar del anejo de integracioacuten ambiental el PVA y el programa de seguimiento que maacutes adelante se trata junto con la justificacioacuten de coacutemo el proyecto cumple las condiciones de la DIA ya que las me-didas preventivas y correctoras definidas en dicho anejo siacute corresponde ejecutarlas al contratista En la praacutectica esta circunstancia se resuelve la mayoriacutea de las veces mediante una asistencia teacutecnica a la direccioacuten de obra frecuentemente asumida por la misma asistencia que verifica la ejecucioacuten del pro-yecto lo cual no impide que la empresa constructora realice simultaacuteneamente en el marco de su propio programa de aseguramiento de la calidad (PAC) al-gunas actividades que en ocasiones se solapan con la propia vigilancia ambiental

La legislacioacuten baacutesica tambieacuten establece claramen-te que el oacutergano ambiental podraacute recabar infor-macioacuten del oacutergano sustantivo asiacute como efectuar las comprobaciones necesarias para verificar el cumplimiento de la DIA tanto en fase de obras como de explotacioacuten A raiacutez de estos supuestos algunas comunidades autoacutenomas han otorgado mayores competencias al oacutergano ambiental asig-naacutendoles las funciones de vigilancia ambiental como en el ya citado caso de la Comunidad de Madrid (Ley 22002 BOCM nordm 154 de 1 de julio de 2002)

Otro aspecto que indudablemente podriacutea contri-buir a la mejora del funcionamiento de los actua-les modelos seriacutea la clasificacioacuten en funcioacuten de sus capacidades de las entidades y profesionales implicados en tareas de vigilancia y control am-biental de obras y de seguimiento de la eficacia de las medidas correctoras

En este sentido destaca el caso de la Junta de Comunidades de Castilla-La Mancha donde existe un Registro de Entidades y Profesionales Autoriza-dos para el seguimiento y control de actividades sometidas a EIA regulado por la Orden de 26-01-2005 de la Consejeriacutea de Medio Ambiente (DOCM nordm 24 de 3 de febrero de 2005) De esta manera se atribuye a estas entidades la responsabilidad sobre el contenido de los informes realizados que deben presentarse tras cada actuacioacuten en la

delegacioacuten provincial correspondiente de la Con-sejeriacutea de Medio Ambiente Las entidades y profe-sionales interesados se pueden acreditar hasta en ocho aacutembitos funcionales (Cuadro 6) en funcioacuten de sus recursos teacutecnicos

Se trata de una estructura organizativa bastante acertada para establecer las bases de una vigilan-cia y un seguimiento ambiental que deben evo-lucionar hacia la integracioacuten efectiva de especia-listas en cada variable a controlar Sin embargo resulta ser un planteamiento inviable mientras los PVA no se presupuesten de manera detallada Es loacutegico pensar que cualquier medida o actividad que represente un coste imprevisto no seraacute asu-mida por ninguacuten agente por lo que los recursos humanos y materiales necesarios para cualquier tarea de seguimiento ambiental deberiacutea valorarse a la vez que se define el PVA e incluirse en el presupuesto de inversioacuten (antes denominado para conocimiento de la administracioacuten) En ninguacuten caso debe incluirse en el presupuesto de ejecu-cioacuten material (PEM) puesto que no corresponde al contratista de la obra su ejecucioacuten y posible-mente su duracioacuten exceda a la de la obra y a la del periacuteodo de garantiacutea de la misma La existencia de un cuadro de precios para cada actividad de vigilancia y seguimiento asiacute como su descomposi-cioacuten permitiriacutea conocer al promotor el presupues-to que debe disponer para realizar la vigilancia y el seguimiento ambiental

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IacuteNDICE

Cuadro 6 Grupo de actividades para el que se solici-ta acreditacioacuten en el Registro de Entidades y Profesionales autorizados para el segui-miento y control de actividades sometidas a EIA en Castilla-La Mancha

1- Flora y vegetacioacuten

2- Fauna

3- Paisaje

4- Agua

5- Gea y suelo

6- Atmoacutesfera

7- Patrimonio histoacuterico artiacutestico y arqueoloacutegico y paleontoloacutegico

8- Ser humano relaciones asociales y condiciones de sosiego puacuteblico

Por supuesto teniendo en cuenta el modelo que maacutes adelante se presenta la valoracioacuten econoacutemica del PVA no deberiacutea incluirse en el presupuesto de ejecucioacuten material del proyecto puesto que en nin-guacuten caso deberiacutea realizarlo el contratista construc-tor Esta obviedad debido al escaso desarrollo de algunos aspectos confusos de la legislacioacuten y so-bre todo las particularidades propias de cada tipo de proyecto lleva a poner de relieve la importancia de la disposicioacuten adicional segunda del RDL 12008 Dicha disposicioacuten adicional habilita al Gobierno en el aacutembito de sus competencias para el desarrollo reglamentario de la Ley en particular para aprobar normas baacutesicas mediante real decreto sobre aque-llos aspectos de caraacutecter teacutecnico o de naturaleza coyuntural y cambiante necesarios para asegurar el miacutenimo comuacuten denominador establecido en la Ley Sin lugar a dudas la vigilancia ambiental es un aspecto muy concreto de la evaluacioacuten ambien-tal que necesita un desarrollo particularizado para cada tipo de proyecto o actividad desde hace mu-cho tiempo

2 Las comisiones mixtas como mecanismo de refuerzo y control

En el caso de Cataluntildea en el texto de las propias DIA se establece como una condicioacuten maacutes al proyec-to la necesidad de formalizar una Comisioacuten Mixta de Concertacioacuten y Control (CMCC) entre el oacutergano ambiental y el oacutergano sustantivo con la finalidad de controlar el contenido periodicidad aplicacioacuten eacutepoca de realizacioacuten de las medidas correctoras y de proteccioacuten que sentildeala la DIA

PROMOTOR OacuteRGANO SUSTANTIVO

OacuteRGANO AMBIENTAL

DIRECCIOacuteN DE OBRA

CONTRATISTA

DIRECCIOacuteN AMBIENTAL DE OBRA

Figura 5 La composicioacuten de la Comisioacuten Mixta de Concertacioacuten y Control (CMCC) estaacute formada como miacutenimo por el promotor el oacutergano sustantivo y el oacutergano ambiental Ademaacutes suelen incorpo-rarse las figuras del director de obra jefe de obra de la empresa adjudicataria y la direccioacuten ambiental de obra (DAO)

Esta CMCC permite al oacutergano ambiental realizar un seguimiento a pie de obra del desarrollo de la mis-ma de forma que contribuye a la correcta ejecucioacuten de las medidas contempladas asiacute como en su defi-nicioacuten cuando resulta preciso hacerlo durante la fase de obras

De la misma forma cualquier modificacioacuten sustan-cial del proyecto que haya de someterse a valoracioacuten se dirime inicialmente en el seno de la CMCC El promotor aporta los datos necesarios y justificati-vos del cambio solicitado junto con una valoracioacuten ambiental y definicioacuten del grado de adecuacioacuten con la DIA realizada por la direccioacuten ambiental de obra (DAO) La CMCC se pronuncia sobre la modificacioacuten y propone al oacutergano ambiental la tramitacioacuten a seguir e informa sobre el cambio solicitado

CMCC PROMOTOR (Consulta)

DECISIOacuteN

DAO (Informe)

Figura 6 Esquema de funcionamiento de la CMCC ante la consulta del promotor sobre una modificacioacuten sustancial del proyecto

Las funciones asiacute estaacuten repartidas claramente de acuerdo con la legislacioacuten el oacutergano ambiental realiza la evaluacioacuten ambiental y establece las medidas el promotor del proyecto es el respon-sable de incorporar las medidas que establece la DIA y el oacutergano sustantivo es el responsable tan-to de hacerlas cumplir como de su seguimiento y

vigilancia La CMCC uacutenicamente supervisa su cum-plimiento y facilita la relacioacuten entre los distintos actores

En todo caso en este esquema la DAO es respon-sable de la aplicacioacuten del PVA desde las fases ini-ciales y previas a la ejecucioacuten del proyecto hasta la finalizacioacuten siendo sus funciones principales las habituales de la vigilancia ambiental El uacutenico cam-bio reside en la existencia de un marco formal de funcionamiento que compensa la debilidad habi-tual de la DAO en escenarios en los que quedariacutea relegada a un segundo plano entre los actores im-plicados

Cuadro 7 Funciones habituales de la DAO

bull Verificar que se cumplen los condicionantes impuestos por la DIA y se ejecutan las medi-das proyectadas

bull Supervisar la ejecucioacuten de las medidas preventi-vas correctoras y compensatorias previstas asiacute como el cumplimiento de aquellas medidas nue-vas aprobadas por la CMCC

bull Planificar y verificar los sistemas de control propuestos en el PVA y realizar los controles

bull Identificar y valorar impactos ambientales residuales o no previstos en el EIA y propo-ner nuevas medidas para minimizar o corre-gir los impactos de forma adecuada

bull Valorar la eficacia de las medidas ejecuta-das respecto a los objetivos ambientales y el grado de correccioacuten en la valoracioacuten del impacto

bull Asesorar al contratista durante la ejecucioacuten de la obra para la correcta aplicacioacuten de las medidas establecidas asiacute como sobre la tra-mitacioacuten de los permisos necesarios

bull Redactar los informes de seguimiento para el oacutergano sustantivo y oacutergano ambiental

bull Redactar y asumir la direccioacuten obra del pro-yecto de medidas correctoras

bull Mantener la coordinacioacuten con la direccioacuten de obra

Indicar por uacuteltimo que en el marco de una CMCC con encuentros regulares durante la ejecucioacuten de las obras es maacutes faacutecil motivar al contratista para la realizacioacuten en tiempo y forma de los diferen-tes traacutemites de caraacutecter ambiental que puedan precisarse

Cuadro 8 Traacutemites entre otros a los que queda obli-gado el contratista para la correcta ejecu-cioacuten del PVA

bull Proporcionar la informacioacuten sobre la forma de ejecucioacuten y materiales utilizados durante la ejecucioacuten de unidades de obra con posibles implicaciones ambientales

bull Facilitar las muestras o el acceso a ellos que se determinen en el PVA

bull Documentar la gestioacuten de residuos

bull Aportar los certificados de calidad de los diferentes materiales utilizados en sus actuaciones (pe la restauracioacuten vegetal)

bull Obtener cuantos permisos de caraacutecter ambiental vertederos vertidos de aguas preacutestamos etc precise

3 Situacioacuten actual de la vigilancia ambiental en relacioacuten con el control de calidad

En la actualidad la vigilancia ambiental queda en-marcada durante la ejecucioacuten de las obras en el con-trol de calidad de las mismas existiendo el riesgo de que se convierta en un formalismo a modo de repa-so de una lista de comprobaciones y la supervisioacuten de autorizaciones dejando de lado la comprobacioacuten de la efectividad de las medidas

Un aspecto importante que hay que considerar es la posibilidad de que la DAO esteacute desligada de la direc-cioacuten de obra lo cual no impide que sus funciones es-teacuten claras y coordinadas con ella Este esquema que a priori puede generar cierta inquietud tendriacutea mejor adaptacioacuten a los recursos realmente disponibles para dichas labores permitiendo una mayor especializa-cioacuten de las funciones ambientales y un mayor grado de control para la correcta ejecucioacuten del PVA

Un ejemplo eficaz de esta adaptacioacuten se encuen-tra reproducido en el modo en que el Administra-dor de Infraestructuras Ferroviarias (ADIF) desa-rrolla la gestioacuten ambiental de las obras de alta velocidad en Espantildea Para ello mediante un pro-cedimiento interno de gestioacuten y coordinacioacuten de actividades ambientales atribuye a la Direccioacuten de Medio Ambiente la responsabilidad del control y vigilancia ambiental de las obras Esta Direc-cioacuten es dependiente de la Direccioacuten de Calidad y Medio Ambiente dentro de la DG de Organiza-cioacuten Seguridad y Recursos Humanos de ADIF Es

Direccioacuten de obra

Comisioacuten Mixta de Concertacioacuten y

Control (CMCC)

Promotor

Contratista

Direccioacuten ambientalde obra

Oacutergano ambiental

Oacutergano sustantivo

DecisioacutenPromotor (Consulta)

DAO(Informe)

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decir la vigilancia y el seguimiento ambiental y por tanto la responsabilidad de certificar el cum-plimiento de la DIA en obra recae en un aacuterea di-ferente de la que dirige la ejecucioacuten de las obras con el objetivo de garantizar la independencia en el proceso (Matas 2008)

Direccioacuten de Calidad y Medio Ambiente

DIRECCIOacuteN AMBIENTAL DE OBRA

DG Grandes Proyectos de Alta Velocidad

DG Desarrollo de la Infraestructura

DG Explotacioacuten de la Infraestructura

PROYECTOS Y EsIADIRECCIOacuteN

FACULTATIVAEXPLOTACIOacuteN

Presidencia

D Comunicacioacuten y Relaciones Externas

Secretariacutea General y del Consejo

DG Seguridad Organizacioacuten y RR HH

DG Planificacioacuten Estrateacutegica

DG Econoacutemico Financiera y de Control

Direcciones de Liacutenea de Alta Velocidad

Figura 7 Esquema simplificado de la asignacioacuten de las responsabilidades de direccioacuten facultativa y DAO en diferentes direcciones generales de ADIF

En este caso la DAO suele recaer sobre una asistencia teacutecnica que supervisa la ejecucioacuten de tres o cuatro tra-mos consecutivos en coordinacioacuten con la direccioacuten fa-cultativa a pie de obra A su vez las diferentes DAO de una liacutenea completa estaacuten coordinadas por teacutecnicos es-pecialistas de la Direccioacuten de Medio Ambiente de ADIF

El anterior esquema de funcionamiento interno cons-tituye un enfoque ambicioso y novedoso en cuanto al compromiso por parte del promotor y oacutergano sus-tantivo en este caso se refiere puesto que impide que una direccioacuten general se certifique a siacute misma el cumplimiento de la DIA Por otro lado las mejoras introducidas a partir de los resultados que con el tiempo se van obteniendo empiezan a ser recono-cidas en el sector y a emplearse como referencias incluso para otros proyectos

Sin embargo volviendo sobre los austeros escena-rios maacutes habituales de la vigilancia ambiental en Espantildea la ausencia de un programa de seguimiento durante la fase de explotacioacuten de las infraestructuras no permite obtener datos concluyentes del grado de eficiencia de las medidas preventivas correctoras y compensatorias aplicadas durante la construccioacuten Esta deficiencia histoacuterica provoca una carencia de

informacioacuten para la elaboracioacuten de los EsIA con-solidando la redaccioacuten de medidas estaacutendar cuya eficiencia es teoacuterica pero no universal

El desarrollo de programas de seguimiento (PS) permitiriacutea evaluar la eficacia de las medidas pro-yectadas asiacute como la posibilidad de modificarlas en caso de necesidad o disponer la ejecucioacuten de medidas adicionales en caso de preverse o de-tectarse nuevos impactos durante los trabajos de mantenimiento de la infraestructura Otro aspecto que se percibe de manera generalizada entre los distintos agentes implicados es que determinados trabajos de mantenimiento pueden impedir el co-rrecto funcionamiento de alguna medida correctora y viceversa Sin embargo la ausencia de evidencias documentadas resulta alarmante despueacutes de tantos antildeos de desarrollo de nuestra red de infraestructu-ras de transporte

Figura 8 Dispositivos de escape para fauna mal ejecutados como consecuencia de una vigilancia ambiental deficiente o a la que no se le reconoce autoridad El primer dispositivo estariacutea constituido por un muro inexistente y una rampa de tierra inacabada (Foto TEG-UAM) El segundo por un portillo abatible que al estar su base enterrada no se puede abrir (Foto Carlos Iglesias)

Debe tenerse en cuenta que la fase de explotacioacuten puede ser administrativamente tan compleja o maacutes que la fase de construccioacuten y que la aparicioacuten de nuevos actores mediante diferentes foacutermulas de con-cesioacuten puede generar una casuiacutestica sin fin En todo

caso conviene que los efectos de caraacutecter ambiental se monitoricen por medio de un programa que cubra esta fase desde el momento en que se recibioacute la obra cuya realidad diferiraacute por completo de la que se daba durante la construccioacuten

III PROGRAMA DE VIGILANCIA AMBIENTAL Y PROGRAMA DE SEGUIMIENTO

1 Esquema director propuesto

Como ya se ha recogido con anterioridad la legisla-cioacuten vigente no diferencia entre las funciones de la vi-gilancia y el seguimiento refirieacutendose indistintamente a ellas como si se tratara de la misma actividad Sin embargo son referidas con la conjuncioacuten copulativa lsquorsquoyrsquorsquo que coordina aditivamente elementos anaacutelogos Es decir consciente o inconscientemente en la legis-lacioacuten baacutesica vigente queda establecida una relacioacuten de semejanza entre dos conceptos anaacutelogos que tie-nen entre siacute alguna coincidencia significativa

Cuadro 9 Definiciones del Diccionario de la Lengua Espantildeola (RAE 2001)

Vigilancia (Del lat vigilant a) cuidado y atencioacuten exacta en las cosas que estaacuten a cargo de cada uno

Seguimiento accioacuten y efecto de seguir

Seguir (Del lat sequ re de sequi con la t de ire) proseguir o continuar en lo empezado

De acuerdo con las definiciones del diccionario de la lengua espantildeola (RAE 2001) la vigilancia con-siste en el cuidado y atencioacuten exacta en las cosas que estaacuten a cargo de cada uno mientras que el seguimiento es la accioacuten y efecto de seguir encon-traacutendose entre las diversas acepciones de seguir las que lo definen como la accioacuten de proseguir o continuar lo empezado asiacute como observar el curso de algo (Cuadro 9) Por tanto teniendo en cuenta estas matizaciones la duracioacuten limitada de la obra de construccioacuten de una infraestructura de transporte frente a su posterior vida uacutetil y la necesidad de vigi-lar y seguir distintos aspectos ambientales en ambas fases con la participacioacuten de diferentes agentes se propone un esquema director que permita diferen-ciar las actividades a realizar en cada una de ellas

Mientras que los objetivos de la vigilancia quedan claramente establecidos en el RD 11311988 la legis-lacioacuten baacutesica vigente no los incluye entre los con-ceptos que define en su anexo 1 Paralelamente el capiacutetulo III del RDL 12008 referido al control del cumplimiento de las DIA establece su marco baacutesico de desarrollo alternando referencias al seguimiento y vigilancia sin establecer diferencias pese a que no

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tienen el mismo significado vigilancia y seguimiento Ante esta situacioacuten y teniendo en cuenta los posi-bles agentes implicados en las distintas fases de proyecto obra y explotacioacuten de una infraestructura

de transporte se advierte la posibilidad de confec-cionar un esquema director de mayor detalle viable y realista que permita la propuesta e implementa-cioacuten de un PVA y un PS vigentes en distintas fases

Estudio Informativo EIA

Proyecto de construccioacuten Ejecucioacuten

APROBACIOacuteN

APROBACIOacuteN

Plan de autocontrol ambiental en obra

Autocontrol ambiental

Deteccioacuten no conformidades (NC)

Ejecucioacuten de medidas y resolucioacuten NC

PLAN de seguimiento Seguimiento

ambiental

Informes de seguimiento

Anaacutelisis y compilacioacuten

Informes de vigilancia

Vigilancia ambiental

Anaacutelisis y en su caso APROBACIOacuteN

PROYECTO (medidas

ambientales)

PROGRAMA de vigilancia

(PVA) y seguimiento

DIA

Retroalimentacioacuten para la mejora de futuros proyectos

Operacioacuten

Oacuterg

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Figura 9 Diagrama de flujo que recoge las distintas fases de la vigilancia ambiental por ejemplo aplicada a las plantaciones en una infra-estructura de transporte los principales documentos que en cada caso se generan asiacute como los agentes implicados en su implementacioacuten

La ejecucioacuten de un proyecto se puede esquematizar en cuatro etapas seguacuten su secuencia cronoloacutegica

bull Fase 1 ndash Fase inicial comienza con el replan-teo de la obra se inicia la implementacioacuten del PVA mediante la evaluacioacuten del contenido de la DIA se revisa el proyecto y se definen las acciones de control ambiental a determinar durante la ejecucioacuten de las obras Se configu-ra el PVA ajustado a la obra en cuestioacuten de acuerdo con lo establecido en la DIA

bull Fase 2 ndash Fase de obras construccioacuten de la infraestructura y liacutemite de vigencia del PVA como se concibe actualmente con el informe final de recepcioacuten de la obra

bull Fase 3 ndash Periodo de garantiacutea primera parte de la fase de explotacioacuten de la infraestructu-ra hasta que finaliza el periacuteodo habitual de garantiacutea A partir de este momento ya no rige el proyecto de construccioacuten y las tareas de seguimiento deben orientarse a evaluar la efi-cacia y evolucioacuten de las medidas correctoras que acompantildearaacuten a la infraestructura durante su vida uacutetil Por ello se propone como mo-mento de inicio del PS a modo de extensioacuten del PVA durante la fase de funcionamiento En este caso teniendo en cuenta un escenario realista de actores y presupuesto se debe-riacutea considerar la capacidad del operador para desempentildear las tareas que por otro lado ac-tualmente ya realiza en muchos casos

bull Fase 4 -Fase de explotacioacuten periacuteodo varia-ble de aplicacioacuten del PS en funcioacuten de las variables objeto del mismo Durante esta etapa se supone una incesante obtencioacuten de resultados fruto de los antildeos de segui-miento sobre el grado de eficacia de las medidas proyectadas Todo ello constituye informacioacuten baacutesica para futuros proyectos

en funcioacuten de los objetivos inicialmente fi-jados que deberiacutea centralizarse mediante sistemas de informacioacuten de faacutecil acceso en el oacutergano ambiental como uacutenico agente conocedor de los procedimientos de EIA desarrollados en relacioacuten con cualquier ti-pologiacutea de proyectos en el aacutembito de sus competencias

Fase 1 (replanteo)

Inicio del PVA

Fase 2 (obras)

PVA (hasta recepcioacuten de la obra)

Fase 3 (garantiacutea)

Inicio del PS

Fase 4 (explotacioacuten)

Continuacioacuten del PS

Recepcioacuten de la obra

Figura 10 Etapas de un proyecto en relacioacuten con el PVA y el PS

La duracioacuten del PS (fases 3 y 4) deberiacutea ser lo su-ficientemente extensa como para garantizar unas conclusiones vaacutelidas que permitan retroalimentar el sistema y la evolucioacuten en el disentildeo de las medidas proyectadas en funcioacuten de los resultados obtenidos y los objetivos inicialmente establecidos Depen-diendo de las variables a seguir se podriacutea recomen-dar una duracioacuten del PS de entre 3 y 10 antildeos

2 Responsabilidades y participacioacuten de los distintos agentes

Seguacuten el diagrama anterior el proyecto de cons-truccioacuten deberiacutea recoger no solo el PVA que re-giraacute durante la ejecucioacuten de las obras sino tam-bieacuten los criterios baacutesicos para el seguimiento ambiental a medio y largo plazo durante la fase de explotacioacuten lo que constituiriacutea el denomina-do PS

El PVA seriacutea de aplicacioacuten directa durante la construccioacuten (hasta la finalizacioacuten del plazo de

garantiacutea de la obra) y corresponderiacutea seguacuten el caso a la direccioacuten facultativa (actuando direc-tamente o a traveacutes de una asistencia teacutecnica) o por ejemplo al oacutergano ambiental en el caso de la Comunidad de Madrid En todo caso quedariacutea integrado en el marco de una CMCC si se ex-tendiese el modelo de funcionamiento de comi-siones mixtas aplicado en Cataluntildea El contra-tista principal podriacutea utilizar el programa para redactar su propio plan de autocontrol integrado en el sistema de aseguramiento de calidad de la obra Evidentemente el plan de autocontrol del contratista complementario del PVA deberiacutea gozar del visto bueno por parte de la direccioacuten facultativa Se supone que a lo largo de la ejecu-cioacuten de los trabajos ambos direccioacuten y contra-tista identificaraacuten no conformidades que seraacuten resueltas por el contratista (incluyendo tambieacuten aquellas vinculadas a las medidas medioambien-tales ejecutadas marras etc) Durante la fase de construccioacuten las pautas y los resultados de la vigilancia ambiental deberiacutean recogerse en in-formes de vigilancia redactados por la direccioacuten

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facultativa seguacuten la legislacioacuten baacutesica De alguna forma estos informes deberiacutean acabar en manos del oacutergano ambiental para lo que el modelo de las mencionadas comisiones mixtas se revela nuevamente como un esquema eficaz

Por uacuteltimo durante la explotacioacuten de la infraes-tructura el operador en el caso de carreteras o el administrador de la infraestructura en el caso de los ferrocarriles estariacutea en disposicioacuten de asumir el seguimiento ambiental a medio y largo plazo pues-to que en algunas ocasiones ya realiza actividades equivalentes como consecuencia de la implantacioacuten de sus sistemas de control de la calidad Ello per-mitiriacutea optimizar los recursos disponibles en labores de seguimiento que actualmente no se realizan in-volucrar a los administradores y operadores respon-sables de las infraestructuras en la elaboracioacuten de documentos e informes de intereacutes para la redaccioacuten de nuevos proyectos poner en valor los documentos que actualmente se generan en dichos procedimien-tos que en el actual esquema no son accesibles y sobre todo permitir el encuentro e intercambio de informacioacuten con actores que de otra manera no coincidiriacutean

Como se ha ilustrado en otros apartados de este capiacutetulo el seguimiento a largo plazo tendriacutea por objeto fundamentalmente generar informacioacuten uacutetil sobre la evolucioacuten del entorno afectado por la infraestructura asiacute como evaluar la eficacia de las medidas correctoras implantadas (incluyendo la revegetacioacuten) Si se quiere este programa de seguimiento tendriacutea un objeto menos teacutecnico y maacutes cientiacutefico (al menos en lo que se refiere a la utilidad de las variables objeto de la monitoriza-cioacuten) Al igual que se apuntaba con los informes de vigilancia los informes de seguimiento a me-dio y largo plazo deberiacutean acabar en el oacutergano ambiental Toda esta informacioacuten adecuadamente procesada tendraacute una indudable utilidad praacutectica para la redaccioacuten de proyectos en el futuro asiacute como para la definicioacuten de las medidas impuestas por las DIA

El modelo propuesto seriacutea compatible con las dis-tintas normas en materia de evaluacioacuten ambiental tanto la legislacioacuten baacutesica como con la de aque-llas comunidades autoacutenomas que de acuerdo con sus competencias han desarrollado esta quedado facultado el Ministerio de Medio Ambiente y Medio Rural y Marino para dictar cuantas disposiciones sean necesarias para el desarrollo de lo establecido

en la legislacioacuten vigente en particular en el actual Reglamento

Por uacuteltimo en el disentildeo de este esquema sobre la base de las experiencias conocidas particularmente el modelo de la CMCC y con el objeto de lograr un flujo de informacioacuten lo maacutes eficaz posible en el sistema seriacutea conveniente incorporar la figura de los redactores de los proyectos y de los EsIA a las citadas comisiones De este modo se situariacutean todos los actores implicados en las distintas fases del pro-yecto tal como se representa en la Figura 11

Propuesta de Comisioacuten Mixta de Concertacioacuten y

Control

(CMCC)

+ +

Direccioacuten de obra

Oacutergano sustantivo

Oacutergano ambiental

Direccioacuten ambiental de obra

Promotor

Contratista

Operadoradministrador

Redactores delProyecto y esia

Figura 11 La incorporacioacuten de los autores del proyecto y del EsIA y posteriormente de las entidades operadoras o administradoras de infraestructuras a las CMCC agilizariacutea la retroalimentacioacuten del sistema independientemente de que la responsabilidad en materia de vigilancia y seguimiento fuera competencia del oacutergano ambi-ental o del oacutergano sustantivo y es compatible con la realidad del Estado y de las distintas comunidades autoacutenomas

3 El seguimiento ambiental en el contexto del aseguramiento de la calidad

De todos es sabido que la implantacioacuten de sistemas y planes que garanticen y controlen la calidad es praacutectica habitual en el aacutembito de la construccioacuten y explotacioacuten de las infraestructuras de transporte sin embargo con frecuencia se omite esta circunstancia por los actores que habitualmente intervienen en los procedimientos de EIA ignoraacutendose las posibilida-des que en materia de seguimiento ambiental ofrece al sistema

En la documentacioacuten de calidad se incluyen o debe-riacutean incluirse las especificaciones de seguimiento y vigilancia ambiental como uno maacutes de los requisitos a cumplir (requisito legal de obligado cumplimiento cuando es consecuencia de la existencia de una DIA

o voluntario si es derivado de la normativa interna de la compantildeiacutea)

Por tanto como parte de la documentacioacuten de calidad en los informes de aseguramiento y con-trol de calidad se deberiacutean relacionar todas las medidas ambientales y sus no conformidades (si las hubiera) asiacute como su resolucioacuten En resumen como se ha tratado en otros apartados de este libro las condiciones ambientales deben ser teni-das en cuenta durante la elaboracioacuten del proyecto en la ejecucioacuten de las obras y durante la explota-cioacuten de la infraestructura

Los requisitos ambientales durante la fase de ela-boracioacuten del proyecto deben ser considerados ele-mentos de entrada al disentildeo (en sus diferentes fases desde el proyecto baacutesico hasta el disentildeo detallado en los proyectos de construccioacuten) y por tanto identificados desde el principio Los con-troles de revisioacuten del disentildeo para garantizar la calidad del mismo deberaacuten asegurar que los re-quisitos ambientales han sido tenidos en cuenta y durante las fases de ejecucioacuten y explotacioacuten se deberaacute obtener informacioacuten que verifique la efica-cia de dichas medidas si no han podido ser vali-dadas anteriormente En cualquier caso se reco-mienda la validacioacuten de dichas medidas a lo largo de la vida de la infraestructura para determinar la idoneidad de las mismas y que estos conocimien-tos puedan ser tenidos en cuenta en la redaccioacuten de futuros proyectos

Durante la ejecucioacuten de la obra con el fin de opti-mizar recursos y hacer maacutes eficiente los procesos asociados a la ejecucioacuten la empresa constructora deberaacute integrar los requisitos ambientales como un elemento maacutes en la gestioacuten de la obra Asiacute si dispo-ne de un plan de aseguramiento de la calidad (PAC) para garantizar que la obra se ejecuta conforme al proyecto se deberaacuten incluir como parte del PAC los procedimientos especiacuteficos de medio ambiente y con ellos los de control seguimiento y vigilancia de forma integrada o no con los de calidad Con esto quedariacutean desarrollados particularizados e in-tegrados en el PAC los requisitos de seguimiento y vigilancia para la fase de construccioacuten

Es praacutectica habitual identificar las unidades de obra con aspectos ambientales asociados para que se ejecuten conforme a lo establecido en los pro-cedimientos de control operacional y se controlen normalmente siguiendo un programa de puntos de

inspeccioacuten (PPI) Los controles a ejecutar durante la vigilancia y seguimiento ambiental en construccioacuten deberaacuten generar sus propios PPI

Como complemento a los autocontroles del contra-tista responsable de la ejecucioacuten de la obra hasta fi-nalizado el periacuteodo de garantiacutea el oacutergano sustantivo (seguacuten la legislacioacuten baacutesica) a traveacutes de la direccioacuten facultativa asistencia teacutecnica o cualquier otra figura independiente respecto de quien ha ejecutado las medidas ambientales establecidas en la DIA haraacute el seguimiento y la vigilancia de dichas medidas con el fin de garantizar su eficacia Como ya se ha comen-tado anteriormente esta responsabilidad en algunas autonomiacuteas recae por ley en el oacutergano ambiental Igualmente el oacutergano ambiental se puede apoyar en una asistencia teacutecnica independiente de quien ejecute las medidas ambientales

Una vez que la infraestructura entra en funciona-miento el responsable de la operacioacuten seriacutea quien como parte de la gestioacuten de la infraestructura de-sarrollara un PS en explotacioacuten que dariacutea respuesta por un lado al cumplimiento de las obligaciones ambientales recogidas en la DIA para esta fase y por otro lado definiriacutea aquellos paraacutemetros ambientales que deberaacute monitorizar Dicha monitorizacioacuten serviraacute para verificar a medio y largo plazo el comporta-miento ambiental de las medidas de restauracioacuten acometidas durante la construccioacuten asiacute como su respuesta ante las labores de mantenimiento que se esteacuten llevando a cabo Estos trabajos de segui-miento ambiental de la empresa que opera y man-tiene la infraestructura deberaacuten estar documentados y registrados como un elemento maacutes de su sistema de gestioacuten optimizando recursos e integrando estos con otros controles de calidad de la infraestructura que pueden estar soportados en el sistema de ca-lidad de la empresa responsable de estos trabajos

Finalmente la participacioacuten de esta entidad en la CMCC creada antes de que se iniciara la obra de la infraestructura en cuestioacuten (Figura 11) permitiriacutea completar el flujo de informacioacuten y la vocacioacuten de servicio puacuteblico que se presupone a cualquier co-misioacuten de estas caracteriacutesticas De este modo se pondriacutean en comuacuten los resultados de la vigilancia y seguimiento ambiental en cada fase asiacute como la po-sible necesidad de plantear nuevas medidas correc-toras disponiendo para la discusioacuten las soluciones maacutes apropiadas en funcioacuten del criterio de todos los especialistas implicados en las distintas fases del ciclo de vida del proyecto

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Figura 12 El estudio de la eficacia de algunas medidas correctoras durante la fase de explotacioacuten como los diferentes disentildeos de dispositivos de escape para la fauna incluidos en estas dos imaacutegenes seriacutean tareas propias del PS (Foto Carlos Iglesias)

IV ALCANCE Y CONTENIDO GENERAL DE LOS PVA Y DE LOS PS

La realizacioacuten del seguimiento se basa en la for-mulacioacuten de paraacutemetros que proporcionan la for-ma de estimar de manera cuantificada y simple en la medida de lo posible la realizacioacuten de las me-didas previstas y sus resultados pueden existir por tanto dos tipos de paraacutemetros indicadores si bien no siempre los dos tienen sentido para todas las medidas por lo que se propone la redaccioacuten de PVA y PS cuya diferencia fundamental reside en

bull PVA se estableceraacuten indicadores de reali-zacioacuten que miden la aplicacioacuten y ejecucioacuten efectiva de las medidas correctoras

bull PS se estableceraacuten indicadores de eficacia que miden los resultados obtenidos con la aplicacioacuten de la medida correctora correspon-diente

1 Contenido del PVA en el proyecto de construccioacuten

El PVA se trata de un documento de caraacutecter abierto que durante el transcurso de la obra debe permitir la deteccioacuten de nuevas afecciones o impactos no previstos anteriormente para los que debe prever alguna respuesta en forma de adopcioacuten de nuevas medidas preventivas o correctoras Ademaacutes el PVA ha de concretar todas las operaciones de control y vigilancia del proyecto tanto espacial como tempo-ralmente y se tendraacute que adaptar continuamente

a los requerimientos del proyecto para alcanzar la maacutexima eficacia

Cuadro 10 Exigencia legal (art 11 del RD 11311988)

hellip El programa de vigilancia ambiental estableceraacute un sistema que garantice el cumplimiento de las indicaciones y medidas protectoras y correctoras contenidas en el estudio de impacto ambiental

El principal objetivo del PVA en el esquema director propuesto se ajusta a las metodologiacuteas habitual-mente desarrolladas para garantizar que el proyec-to sometido a control se desarrolle cumpliendo con los condicionantes ambientales emanados de la DIA y por lo general los sistemas establecidos en el proyecto permiten detectar cualquier desviacioacuten en obra o incluso impactos no previstos con anteriori-dad Sin embargo el modo en que se implementa el PVA y cierta desautorizacioacuten praacutectica de los teacutecni-cos implicados en vigilancia ambiental como conse-cuencia de su posicioacuten en el esquema de los actores que habitualmente intervienen en obra constituyen la principal debilidad del actual modelo Por este motivo seriacutea deseable la existencia de una comisioacuten mixta en la que se verifique cada hito y queden de manifiesto las responsabilidades e informes de cada parte implicada

Figura 13 La limpieza final y durante la obra en el entorno de las obras de drenaje es un punto de particular atencioacuten del PVA (izquierda) Acopios de tierra vegetal dispuestos en el periacutemetro de la ocupacioacuten de la obra (derecha) (Foto Carlos Iglesias)

Cuadro 11 Objetivos habitualmente incluidos en el PVA de un proyecto de construccioacuten

bull Controlar la correcta ejecucioacuten de las medidas de integracioacuten ambiental proyectadas y su adecuacioacuten a los criterios establecidos en la DIA

bull Detectar impactos no previstos en el EsIA y plantear las oportunas medidas protectoras correctoras etc

bull Verificar los estaacutendares de calidad de los materiales (tierra plantas agua etc) y medios propuestos en el proyecto de construccioacuten

bull Comprobar la efectividad de las medidas ejecutadas y en caso de ineficacia determinar las posibles causas y propuesta de soluciones

bull Valorar y proporcionar informacioacuten acerca de la calidad y oportunidad de las medidas protectoras yo correctoras yo compensatorias ejecutadas

bull Informar al oacutergano competente (y a la CMCC cuando proceda) sobre los aspectos objeto de vigilancia y ofrecerle un meacutetodo sistemaacutetico lo maacutes sencillo y econoacutemico posible para realizar la vigilancia de una forma eficaz

bull Establecer el tipo de informes su frecuencia y el procedimiento de remisioacuten al oacutergano competente y cuando proceda a la CMCC

bull Establecer un protocolo de funcionamiento vaacutelido con el papel previsto para cada actor que permita adoptar nuevas medidas no contempladas en el proyecto o modificar sustancialmente las proyectadas

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IacuteNDICE

En el PVA deben quedar organizados los diferentes aacutembitos de control lo que podriacutea realizarse agru-pando la informacioacuten por variables ambientales (agua aire vegetacioacuten fauna etc) y las medidas dedicadas a cada una de ellas o seguacuten su incidencia sobre diferentes acciones de la obra (excavaciones instalaciones rutas etc)

Para cada accioacuten de control que se defina se habraacute de definir como miacutenimo

bull Metodologiacutea y sistemas de control (visual muestreos etc) asiacute como el personal y los materiales a utilizar en cada caso

bull Frecuencia y momento de aplicacioacuten se de-finiraacute el momento de inicio asiacute como el pe-riodo en el que se realizaraacute el control y su periodicidad

bull Alcance se debe indicar en queacute circunstancias se tiene que realizar el control y definirse la unidad de referencia

bull Indicadores ambientales y niveles de refe-rencia en los casos en que se definan se deben establecer los paraacutemetros de referen-cia y los valores umbrales con indicacioacuten expresa de la normativa vigente cuando proceda

Para implementar lo anterior lo maacutes habitual es que la DAO se dote de una asistencia teacutecnica En

cualquier caso con recursos propios o mediante asistencia teacutecnica en obra se necesita estimar de alguacuten modo la realizacioacuten de las medidas previstas en proyecto y en ocasiones los re-sultados de las que en ese momento se puedan valorar Para ello suelen establecerse dos tipos de paraacutemetros indicadores si bien no siempre los dos tienen sentido para todas las medidas a vigilar

bull Indicadores de realizacioacuten en obra permiten me-dir o estimar la aplicacioacuten yo ejecucioacuten de una medida protectora yo correctora yo compensato-ria

bull Indicadores de eficacia permiten medir o esti-mar cualitativamente la funcionalidad de las me-didas protectoras yo correctoras yo compensa-torias

De los valores de estos indicadores el sistema de vigilancia debe permitir la adopcioacuten de nuevas me-didas correctoras o la repeticioacuten de las aplicadas Por este motivo los indicadores van acompantildeados de umbrales de alerta que advierten de la existen-cia de una no conformidad o de ineficacias reales o potenciales

Si el modelo en el que se desarrolla la vigilancia ambiental no permite lo anterior la vigilancia seraacute ineficaz en siacute misma independientemente del con-tenido del propio PVA la calidad del proyecto y el procedimiento de EIA precedentes

Cuadro 12 Cronologiacutea habitual de los informes que se deben realizar en la obra de una infraestructura de transporte

bull Antes del inicio de las obras

Sirve para verificar la adecuacioacuten del proyecto de construccioacuten a la DIA extractar el PVA del proyecto y adecuarlo a la realidad del momento y suele tener la pretensioacuten de incorporar el PAC del contratista para crear un documento de referencia con todos ellos

bull Paralelo al acta de comprobacioacuten del replanteo

Sirve para constatar la delimitacioacuten definitiva de todas las aacutereas afectadas por la obra y sus elementos auxiliares verificar la situacioacuten de los principales valores de los indicadores sobre jalonamiento de las obras para su revisioacuten por exceso o defecto de los valores umbral etc Momento en el que tambieacuten suele tenerse la pretensioacuten de que el contratista presente un lsquomanual de buenas praacutecticas ambientales en obrarsquo

bull Informes perioacutedicos durante la fase de obras

En funcioacuten del promotor suele establecerse una frecuencia variable para la remisioacuten de una serie de informes perioacutedicos ordinarios cuya principal finalidad es documentar y recopilar las incidencias acontecidas durante ese tiempo

bull Informes especiales

Con independencia de los anteriores se suele contemplar la emisioacuten de informes especiales cuando se presenten situaciones o circunstancias que justifiquen su comunicacioacuten urgente a los distintos responsables de la obra Lo normal es que en el propio PVA se indiquen los asuntos que puedan requerir una atencioacuten particular

bull Antes del acta de recepcioacuten de la obra

Lo ideal seriacutea que el informe anterior al acta de recepcioacuten de la obra se compusiera de una serie de informes especiacuteficos sobre cada variable ambiental y las medidas preventivas yo correctoras yo compensatorias establecidas en cada caso incluyendo su valoracioacuten hasta la fecha

2 Contenido del PS a medio y largo plazo

El programa de seguimiento (PS) se define como aquel que permite extender el control de la eficacia de las medidas ambientales con posterioridad a la recepcioacuten de la obra durante un plazo inicialmente estimado de 3 a 10 antildeos para estudiar la evolucioacuten de su eficacia y funcionalidad asiacute como el segui-miento y deteccioacuten de nuevos impactos no previstos en fases previas Como se ha sentildealado con anterio-ridad el seguimiento a medio y largo plazo busca recopilar datos y generar informacioacuten uacutetil sobre la evolucioacuten de las medidas correctoras asiacute como su incidencia sobre el entorno de la infraestructura

El programa de seguimiento tendriacutea un componen-te maacutes cientiacutefico que teacutecnico (al menos en lo que se refiere al estudio de las variables monitorizadas) y en el escenario propuesto permitiriacutea estrechar el contacto con el mundo acadeacutemico asiacute como impul-sar las divisiones de I+D+i (Investigacioacuten + Desarro-llo + innovacioacuten) del sector privado En coherencia con los apartados anteriores de este capiacutetulo el PS

deberiacutea incluirse en un anejo especiacutefico del proyec-to junto con la justificacioacuten del cumplimiento de la DIA y el PVA y su presupuesto deberiacutea quedar detallado en el presupuesto de inversioacuten

Recepcioacuten de la obra

Antildeo 0 1 2 3 4 5 6

P GARANTIacuteA

Figura 15 El PS se empezariacutea a aplicar en el mismo momento de recepcioacuten de la obra y su duracioacuten puede exceder ampliamente el periacuteodo de garantiacutea de la misma Ademaacutes el seguimiento de cada medida correctora o variable ambiental que se debe monitorizar puede tener diferente duracioacuten

La primera parte de la fase de funcionamiento se so-lapa con el periacuteodo de garantiacutea de la obra por lo que la deteccioacuten raacutepida de cualquier desviacioacuten de las me-didas correctoras sobre lo previsto inicialmente auacuten podriacutea ser teoacutericamente rectificada No obstante en este momento ya no rige el proyecto de construccioacuten por lo que se propone la necesidad de implementar

Figura 14 La imagen de la izquierda muestra el hueco existente en la base del cerramiento de una infraestructura lo que incrementa el riesgo de atropello de fauna en la fase de explotacioacuten (Foto Carlos Iglesias) La imagen de la derecha ilustra una solucioacuten al anterior inconveniente (Foto Xavier Artigas)

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IacuteNDICE

un PS como extensioacuten del PVA durante la fase de funcionamiento con nuevos responsables y maacutergenes de actuacioacuten Por ello teniendo en cuenta la realidad de las Administraciones y de las empresas implicadas en el aacutembito de las infraestructuras de transporte se propone el esquema desarrollado en este capiacutetulo aprovechando la capacidad del operador para desem-pentildear tareas de seguimiento que en muchos casos ya realizan como parte de su propio PAC

Sin embargo teniendo en cuenta la composicioacuten de la CMCC que tambieacuten se propone en este

capiacutetulo (Figura 11) en lo que concierne a las me-didas relacionadas con el procedimiento de EIA dichas tareas de seguimiento estariacutean sometidas al control puacuteblico de las administraciones respon-sables y al control teacutecnico de las empresas cons-tructoras y de ingenieriacutea participantes en las fases anteriores De esta manera toda la informacioacuten quedariacutea inmediatamente recopilada por el oacutergano competente en materia de vigilancia y seguimien-to y por otro lado los resultados obtenidos ten-driacutean una aplicabilidad directa sobre las medidas que habiacutea que considerar en futuros proyectos

Cuadro 13 Debido a las caracteriacutesticas de la fase de explotacioacuten cronologiacutea posible de informes de seguimiento en infraestructuras de transporte

bull Posterior a la recepcioacuten de la obra

Establece el estado de recepcioacuten de la obra en lo concerniente a las medidas preventivas yo correctoras yo compensatorias ejecutadas

bull Informes perioacutedicos durante el periacuteodo de garantiacutea

En funcioacuten de la variable a seguir o de la medida analizada se estableceraacute la frecuencia de remisioacuten de informes perioacutedicos ordinarios cuyos resultados puedan dar lugar a reclamaciones a los contratistas con motivo de la garantiacutea de obra

bull Informes semestrales yo anuales

En funcioacuten de la variable a seguir o de la medida analizada se estableceraacute la frecuencia de remisioacuten de informes perioacutedicos ordinarios cuyo periacuteodo de emisioacuten maacutes habitual seriacutea semestral o anual

bull Informes especiales

Con independencia de los anteriores se contempla la emisioacuten de informes especiales cuando se presenten situaciones o circunstancias que justifiquen su comunicacioacuten urgente a los distintos responsables de la obra

bull Informe final de seguimiento ambiental

En funcioacuten de la duracioacuten del seguimiento de cada variable ambiental o de la medida analizada se elaboraraacute un informe final de seguimiento en el que se incluyan las principales conclusiones aprendizajes yo recomendaciones que se podriacutean extraer de cara a su consideracioacuten en futuros proyectos y procedimientos de EIA

V CONTENIDO TEacuteCNICO DE LOS PVA Y PS

1 Hacia la actualizacioacuten de los PVA y PS

Como se ha podido comprobar en los capiacutetulos pre-cedentes la informacioacuten volcada en este libro es muy reciente a la par que novedosa Gran parte de esta informacioacuten la componen resultados y con-clusiones de artiacuteculos cientiacuteficos publicados recien-temente en prestigiosas revistas internacionales ademaacutes se ha adelantado informacioacuten todaviacutea no publicada que formaraacute parte de artiacuteculos cientiacutefi-cos bien porque estaacuten en proceso de publicacioacuten (artiacuteculos en prensa) bien porque se trata de re-sultados todaviacutea no publicados (ineacuteditos) Este es-fuerzo de revisioacuten y actualizacioacuten se debe en gran medida a que la mayoriacutea de losas autoresas del libro son miembros de los equipos de investigacioacuten que estaacuten dirigiendo yo participando en distintos proyectos de investigacioacuten en este aacutembito Por lo tanto se puede afirmar que la liacutenea de investiga-cioacuten en nuestro paiacutes progresa a buen ritmo y a un gran nivel reconocido internacionalmente

Para que estos resultados de investigacioacuten se inte-gren en los procesos productivos de los distintos actores que participan del ciclo de vida de las in-fraestructuras de transporte lineales es necesario abordar el desarrollo e innovacioacuten de nuevos pro-ductos y procesos a partir de estos resultados tal y como marca el proceso habitual de la I+D+i En este sentido y dado que es un proceso necesariamente posterior a la investigacioacuten todaviacutea estamos en un estadio temprano como para proponer los suficien-tes indicadores valores umbral de los mismos asiacute como medidas complementarias que permitan ga-rantizar y optimizar los resultados de las medidas correctoras propuestas El contenido teacutecnico de los PVA y PS que se avanzan a continuacioacuten se plan-tean como ejemplos de toda una bateriacutea de innova-ciones que deben producirse a corto y medio plazo en este aacutembito

2 Contenido teacutecnico del PVA indicadores de realizacioacuten en obra

A continuacioacuten se incluye un ejemplo de la incor-poracioacuten progresiva de nuevos conocimientos para la definicioacuten de los paraacutemetros maacutes importantes que podriacutean ser controlados por un PVA durante la ejecucioacuten de las obras de una infraestructura de transporte

Ejemplo calidad del suelo para la restauracioacuten de la cubierta vegetal

La mayoriacutea de los factores relacionados con los as-pectos cualitativos del suelo para la restauracioacuten de la cubierta vegetal poseen en comuacuten que el momento idoacuteneo para su control coincide con la construccioacuten del talud Puesto que una vez fina-lizada la obra es difiacutecil corregir cualquier aspecto del suelo que perjudique la restauracioacuten del talud a excepcioacuten de la fertilizacioacuten (veacutease capiacutetulo 7) no se incluyen indicadores de eficacia para el PS recogieacutendose como principales indicadores de rea-lizacioacuten los siguientes

Identificacioacuten de la medida correctora evaluacioacuten previa de los factores edaacuteficos que limitan el desarrollo de la vegetacioacuten

bull Factor agua disponible para las plantas

Objetivo analizar la relacioacuten entre los aportes y las peacuterdidas de agua el balance final deter-minaraacute la cantidad de agua disponible para la vegetacioacuten

Indicador balance entre aportes (precipitacio-nes y surgencias) peacuterdidas (escorrentiacutea en el talud) y capacidad de retencioacuten por parte del talud (pendiente compactacioacuten y textura del suelo microtopografiacutea contenido en materia orgaacutenica)

Frecuencia de la medida una sola vez durante la construccioacuten del talud

Valor umbral aunque este valor umbral de-penderaacute del nivel de compactacioacuten y la tex-tura del suelo en suelos maacutes compactados y arcillosos las pendientes tendraacuten que ser menores que en suelos arenosos y menos compactados (veacutease Capiacutetulo 2)

Momentos de anaacutelisis del valor umbral al fi-nalizar la construccioacuten del talud

bull Factor reciclado de nutrientes

Objetivo crear sistemas autosuficientes a lar-go plazo evitar los tratamientos perioacutedicos de fertilizacioacuten

Figura 16 El seguimiento de los pasos de fauna especiacuteficos (autoviacutea A-52 a la izquierda y autoviacutea M-501 a la derecha) en fase de explotacioacuten combinariacutea al menos el estudio de su eficacia sobre la permeabilidad fauniacutestica de la infraestructura y la evolucioacuten de la cubierta vegetal en su superficie (Foto TEG-UAM)

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IacuteNDICE

Indicador existencia de tierra vegetal rela-cioacuten carbononitroacutegeno (CN) actividad bioloacute-gica del suelo

Frecuencia de la medida una sola vez durante la construccioacuten del talud

Valor umbral no existe valor umbral para la tierra vegetal se debe potenciar su conser-vacioacuten en la mayor parte de la superficie del talud

Momentos de anaacutelisis del valor umbral al fi-nalizar la construccioacuten del talud

bull Factor pH

Objetivo evitar pH y valores de salinidad demasiado alejados de los que se pueden encontrar en el entorno no afectado por mo-vimiento de tierras o en espacios con vegeta-cioacuten natural proacuteximos

Indicador anaacutelisis del pH y la salinidad del suelo

Frecuencia de la medida una sola vez durante la construccioacuten del talud

Valor umbral normalmente el pH se deberiacutea encontrar entre 45 y 85 aunque esto va a depender del tipo de suelo del entorno no afectado y de la existencia de flora singular que sea de intereacutes introducir en el talud como especialistas edaacuteficas o de suelos salinos

Momentos de anaacutelisis del valor umbral al fi-nalizar la construccioacuten del talud

3 Contenido teacutecnico del PS indicadores de seguimiento en fase de explotacioacuten

A continuacioacuten se incluye un ejemplo aplicable al seguimiento del recubrimiento vegetal despueacutes de ejecutada la obra durante las labores de conserva-cioacuten y mantenimiento de la infraestructura y de la estabilidad de la superficie de un talud mediante el funcionamiento ecosisteacutemico del mismo en su fase de explotacioacuten

a Identificacioacuten de la medida correctora recubrimiento vegetal

bull Objetivo asegurar suficiente cobertura vege-tal para evitar procesos erosivos Integracioacuten

paisajiacutestica Mejora del funcionamiento eco-sisteacutemico del talud

bull Indicador cobertura vegetal

bull Frecuencia de la medida 2 veces al antildeo du-rante los primeros 5 antildeos En abrilmayo (se-guacuten la zona) momento de maacuteximo desarrollo vegetal y en julio momento de miacutenima co-bertura anual

bull Valor umbral 55 de cobertura mediante meacutetodo de punto-contacto (Andreacutes y Jorba 2000 El meacutetodo se explica maacutes adelante)

bull Momentos de anaacutelisis del valor umbral abrilmayo Aunque depende del tipo de talud y la bioclimatologiacutea normalmente si esta cober-tura baja de un miacutenimo del 50 durante el verano habriacutea que tomar medidas

bull Medida complementarias porcentaje de espe-cies perennes riqueza de especies y domi-nancia (iacutendice de Berger-Parker)

bull Observaciones el meacutetodo del punto-contacto es un meacutetodo que permite muestrear cobertura y diversidad de especies de una forma raacutepida y faacutecil Se estableceraacuten entre 3 y 5 transectos por cada zona de seguimiento (tres zonas de seguimiento por cada tipo de talud desmonte o terrapleacuten y cada tipo de suelo y clima) Es-tos transectos se realizan con la ayuda de una cinta meacutetrica la cual se colocaraacute a partir de 5 m desde la cabecera del talud y hasta 5 m del final del mismo (zona tampoacuten Figura 17) Una vez colocadas las cintas se trata de anotar cada 10 cm de esta cinta queacute tipo de vege-tacioacuten contacta con la cinta (suelo desnudo vegetacioacuten muerta o la especie vegetal en concreto) Para ello nos podemos ayudar de una barra riacutegida la cual colocaremos de forma vertical a la cinta meacutetrica aquello que toque con la barra seraacute lo que anotemos Una vez finalizados los transectos se trata de calcular mediante sencillas reglas de tres el porcen-taje de cobertura vegetal (viva y muerta) y el porcentaje de cobertura ocupado por cada especie Con estos datos tambieacuten podremos calcular iacutendices de diversidad (recomendamos el iacutendice de Hulbert 1971 probabilidad de un encuentro interespeciacutefico (del ingleacutes PIE pro-bability of interspecific encounter) porcentaje de especies perennes (mediante las mismas reglas de tres una vez identificadas cuaacuteles de

estas especies son perennes y calculando el porcentaje basaacutendose en a aquellos contac-tos con especies vegetales eliminando suelo

Figura 17 Descripcioacuten del meacutetodo punto-contacto

bull Observaciones

La probabilidad de un encuentro inter-especiacute-fico (PIE Hulbert 1971) es igual a

donde N es el nuacutemero total de contactos de espe-cies vegetales vivas encontrados S es el nuacutemero de especies encontradas y p

i es la proporcioacuten del

total de individuos representados por cada espe-cie en concreto Si este iacutendice es muy bajo (lt02) se deberaacuten tomar medidas para aumentar la di-versidad (pe plantacioacuten de lentildeosas herbicidas selectivos o fertilizacioacuten con C dependiendo del caso Veacuteanse Capiacutetulos 6 y 7 de este libro)

El iacutendice de Berger-Parker es un meacutetodo de faacutecil caacutelculo complementario al PIE descrito anteriormente que nos permitiraacute conocer la existencia de especies extremadamente domi-nantes que puedan comprometer el desarrollo del proceso sucesional del talud y el eacutexito de otras medidas correctoras (Garciacutea-Palacios et al 2010) Aprovechando los datos del meacute-todo punto-contacto anteriormente descrito podemos calcularlo sin ninguacuten esfuerzo extra

El iacutendice de Berger-Parker es igual a NmaxN siendo Nmax el nuacutemero de contactos de la especie maacutes abundante y N el nuacutemero total de contactos (aquiacute solo contaremos aque-llos contactos de especies vivas eliminan-do aquellos de suelo desnudo o vegetacioacuten muerta) localizados en el transecto Si este iacutendice es mayor de 05 deberiacuteamos aplicar

1 Establecer transecto

2 Anotar queacute encontramos cada 10 cm

3 Ayudarnos de una barra riacutegida para ver queacute se cruza con el transecto

Liacutenea de transecto (en rojo)

Superficie de talud

5 m (zona tampoacuten)

5 m (zona tampoacuten)

desnudo) y el iacutendice de dominancia (recomen-damos el iacutendice de Berger-Parker explicado maacutes adelante)

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IacuteNDICE

medidas correctoras (uso de herbicidas es-peciacuteficos fertilizacioacuten con C (veacutease Capiacutetulo 7)

b Identificacioacuten de la medida correctora funcionamiento ecosisteacutemicoestabilidad del talud

bull Objetivo identificar el grado de eacutexito del pro-ceso de restauracioacuten

bull Indicador meacutetodo LFA (landscape functional analysis)

bull Frecuencia de la medida dos veces por antildeo

bull Valor umbral el meacutetodo genera tres iacutendices de funcionamiento No existen valores umbral concretos el gestor deberaacute tratar de que es-tos iacutendices sean lo maacutes altos posibles y so-bre todo de que aumenten cada antildeo Esta es una medida integrativa muy buena del eacutexito del proceso de restauracioacuten

bull Momentos de anaacutelisis del valor umbral abrilmayo

bull Medidas complementarias dependiendo de doacutende identifiquemos el fallo aplicaremos di-ferentes medidas correctoras (veacutease bibliogra-fiacutea recomendada y Capiacutetulo 7)

bull Observaciones la descripcioacuten detallada de esta metodologiacutea se encuentra en httpwwwcsiroauservicesEcosystemFunctionAnalysishtml o en httpwwwrevistaecosistemasnetrevista_frameasppagina=2Farticuloasp3FId3D8826Id_Categoria3D126tipo3Dportada (para una breve descripcioacuten en espantildeol) No obstante se ofrece en este libro un pequentildeo resumen intro-ductorio

Esta metodologiacutea se basa en la existencia de fuentes y sumideros de recursos Las fuen-tes en este caso son los espacios libres de vegetacioacuten (suelo desnudo) los cuales gene-ran escorrentiacutea cuando llueve permitiendo el transporte de agua y nutrientes (y la peacuterdida de suelo asociada) hasta zonas donde se re-tiene este flujo de sedimentos (los sumide-ros) Estos sumideros estaacuten formados bien por la vegetacioacuten existente o por estructuras inertes (restos de ramas rocas relieves del terreno) que retienen parte del flujo de agua y nutrientes procedentes de las aacutereas de suelo desnudo cercanas (Figura 18)

Figura 18 Ilustracioacuten de zonas fuente y aportacioacuten de sedimentos (flechas azules) y zonas sumidero y retencioacuten de sedimentos (en rojo)

Esta metodologiacutea se basa en dos partes principa-les la realizacioacuten de transectos donde se identi-fican las clases de parches (o sumideros) que te-nemos y la caracterizacioacuten de cada uno de estos parches (incluyendo las zonas fuente)

TRANSECTOS

En estos transectos cuantificamos median-te un meacutetodo muy similar al punto-contacto (descrito anteriormente) doacutende se encuen-tran estos parches la distancia entre ellos y su tamantildeo Para ello el inventor de este meacutetodo (David Tongway) nos facilita en su paacutegina web una hoja de caacutelculo de Excel que nos calcularaacute automaacuteticamente estas varia-bles una vez introducidos los datos del tran-secto (Figura 19)

CARACTERIZACIOacuteN

En esta parte nos encargaremos de cuanti-ficar las caracteriacutesticas principales de estos parches mediante 11 variables de raacutepida me-dicioacuten Esta variables nos permiten calcular los tres iacutendices de funcionamiento que nos da este meacutetodo (se calculan con la misma hoja de caacutelculo Excel descrita anteriormente) daacutendonos un valor de funcionamiento para el talud muestreado Realizando este meacutetodo en tres taludes de cada tipo (desmonte o terra-pleacuten) por cada zona compartiendo el mismo tipo de suelo y clima obtendremos una me-dida muy buena del eacutexito de las diferentes medidas de restauracioacuten realizadas y su eacutexito en cada tipo concreto de talud al que nos en-frentamos en la infraestructura vial completa La Tabla 1 resume las medidas que tendremos que hacer y para queacute iacutendices se utilizan

Figura 19 Representacioacuten de transecto donde se identifican distintos tipos de parches sumidero asiacute como su anchura Veacutease la metodologiacutea detallada en httpwwwcsiroauservicesEcosystemFunctionAnalysishtml

(a) Grasses with ring formation

DOWNSLOPE

Patch length

NB Soil inside ring doesnot comprise inter-patch

Patch length

Obstruction width

Obstruction width(must be in contact with the soil)

(b) Clumps of grassesEither growing closely together or connected with litter bridgesAlso includes situation whereTape crosses a litter bridge

Patch length

Patch length

Obstruction width

(c)Log

TAPE

Patch length

Obstruction width

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IacuteNDICE

Tabla 1Resumen de las variables que hay que medir en cada tipo de parche la lectura bioloacutegica que obtenemos de ellas y para cuaacutel de los tres iacutendices que nos da la metodologiacutea LFA se utiliza

VARIABLE SIGNIFICADO IacuteNDICE EN EL QUE SE UTILIZA

Cobertura totalVulnerabilidad a la erosioacuten y peacuterdida de suelo por el impacto de gotas de lluvia

Estabilidad

Cobertura basal de especies herbaacuteceas y arbustivas

Evaluacutea la contribucioacuten de la biomasa de raiacuteces a los procesos de reciclaje de nutrientes

Infiltracioacuten

Reciclaje de nutrientes

Cobertura de hojarasca origen y grado de descomposicioacuten

Indica la cantidad y calidad de la materia orgaacutenica

Infiltracioacuten

Reciclaje de nutrientes

Cobertura de costra

bioloacutegica (formada por

cianobacterias musgos y

liacutequenes)

Indicador de la estabilidad de la superficie del suelo de su resistencia a la erosioacuten y de la disponibilidad de nutrientes

Reciclaje de nutrientes

Grado de fragmentacioacuten de

la costra

Mide la cantidad de costra superficial disponible para la erosioacuten hiacutedrica o eoacutelica

Estabilidad

Tipo y grado de erosioacutenEstima la naturaleza y gravedad de los procesos erosivos actuales

Estabilidad

Materiales depositadosEvaluacutea la cantidad de depoacutesitos aluviales

Estabilidad

Microtopografiacutea

Indicador de la rugosidad de la superficie del suelo basada en su capacidad para retener agua sedimentos y semillas

Infiltracioacuten

Reciclaje de nutrientes

Resistencia a la

perturbacioacutenEstima la probabilidad de perder suelo por una perturbacioacuten mecaacutenica

Estabilidad

Test de humectacioacutenEvaluacutea la estabilidaddispersioacuten de los agregados del suelo cuando estaacute huacutemedo

Estabilidad

Infiltracioacuten

TexturaIndicador de la capacidad de infiltracioacuten y almacenamiento de agua

Estabilidad

Modificado de Tongway et al 2004 Veacutease metodologiacutea detallada en httpwwwcsiroauservicesEcosys-temFunctionAnalysishtml

VI PREGUNTAS CLAVE

iquestEs lo mismo seguimiento y vigilancia ambiental

Aunque la legislacioacuten actual no los diferencia conceptualmente no es lo mismo seguimiento que vigilancia ambiental La existencia de diferentes actores en las fases de construccioacuten y explotacioacuten de infraestructuras de transporte hace recomen-dable desarrollar ambas actividades en la legis-lacioacuten baacutesica no solo desde la perspectiva de la disciplina y responsabilidad ambiental sino por su potencial impliacutecito para actualizar y consoli-dar el conocimiento teacutecnico y cientiacutefico de cada momento

iquestPuede el contratista vigilarse a siacute mismo

Con independencia del oacutergano competente en materia de seguimiento y vigilancia ambiental el contratista no debe asumir la vigilancia ambiental de su propia obra en ninguacuten caso

iquestDebe incluirse el presupuesto del PVA en el presupuesto de ejecucioacuten material (PEM) del proyecto

En ninguacuten caso el PVA debe formar parte del PEM del proyecto puesto que no es una actividad que deba realizar el contratista sino el oacutergano respon-sable con personal propio o mediante asistenta teacutecnica El lugar adecuado para valorar su coste econoacutemico es el presupuesto de inversioacuten antes denominado presupuesto para conocimiento de la Administracioacuten

iquestPuede un operadoradministrador implementar el PS de su propia infraestructura

Teniendo en cuenta la limitacioacuten de recursos de la Administracioacuten como demuestra la experien-cia de estos 25 antildeos de evaluacioacuten ambiental es recomendable aprovechar el PAC del operadoradministrador por su complementariedad y dupli-cacioacuten en ocasiones con las tareas propias del seguimiento ambiental en fase de explotacioacuten Debido a la componente cientiacutefica de esta fase y la necesidad de reportar a una CMCC ya fuera con recursos propios o ajenos previsiblemente res-paldariacutea el desarrollo de la I+D+i en las empresas yo potenciariacutea la colaboracioacuten con instituciones acadeacutemicas y de investigacioacuten

iquestDebe incluirse el presupuesto del PS en el PEM del proyecto

En ninguacuten caso el PS debe formar parte del PEM del proyecto puesto que no es una actividad que deba realizar el contratista de la obra sino el oacuter-gano responsable con personal propio o mediante asistenta teacutecnica Quizaacutes en el futuro pueda ser desarrollado por el operadoradministrador de la infraestructura reportando a la CMCC de acuerdo con la propuesta elaborada en este libro El lugar adecuado para la valoracioacuten de su coste econoacutemi-co es el presupuesto de inversioacuten

iquestPor queacute el seguimiento arqueoloacutegico en ocasiones se incluye en el PEM del proyecto

No deben confundirse los procedimientos admi-nistrativos en relacioacuten con el patrimonio cultural que en ocasiones por la operativa de las obras obliga a que el propio contratista gestione las au-torizaciones con las consejeriacuteas correspondientes y se ve obligado a realizar una serie de trabajos previos (prospecciones arqueoloacutegicas sondeos etc) con personal propio o contratado con la cualificacioacuten exigida por las administraciones competentes Estas otras actividades relaciona-das con la obtencioacuten de algunos permisos admi-nistrativos por parte del promotor yo contratista suponen un coste con elevada probabilidad de ser asumido por este uacuteltimo y por inercia con frecuencia suele incluirse el seguimiento arqueo-loacutegico de las obras como una maacutes de estas activi-dades en el PEM Sin embargo no es loacutegico que la vigilancia en obra arqueoloacutegica o de cualquier otra naturaleza sea dirigida por el contratista ni que se incluya como una unidad del PEM Aunque es una materia especiacutefica no tratada en este libro a semejanza de cualquier otro factor ambiental el seguimiento arqueoloacutegico podriacutea formar parte del PVA y valorarse en el presupuesto de inversioacuten

iquestPuede intervenir en el PS el mismo equipo que en el PVA

Tanto el PS como el PVA deben llevarlo a cabo especialistas en cada variable ambiental o medi-da correctora y la participacioacuten en una de las fases no tiene por queacute inhabilitar a un equipo para poder participar en la otra si su cualificacioacuten es adecuada

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IacuteNDICE

VII CONCLUSIONES

La vigilancia y el seguimiento de las actividades y proyectos sometidos a EIA forman parte del pro-cedimiento por tanto no es bueno que el oacutergano ambiental se desligue en ninguna fase del mismo como la praacutectica demuestra que viene sucediendo en determinados proyectos y Administraciones

A pesar del trascurso de los antildeos sigue existiendo mu-cha distancia entre la teoriacutea de los modelos multidiscipli-nares y participativos y su aplicacioacuten praacutectica y deberiacutean aprovecharse las mejores experiencias conocidas para introducir mejoras en los protocolos de funcionamiento

El elevado nivel de detalle de las medidas correcto-ras de impacto ambiental y de los PVA incluidos en los proyectos de construccioacuten carece de eficacia si no se implementan con el mismo nivel de exigencias y supervisioacuten que la redaccioacuten de los proyectos

La dispersioacuten de la informacioacuten y documentos ema-nados de la fase de seguimiento y vigilancia am-biental es una debilidad del sistema que requiere

corregirse La creacioacuten de comisiones mixtas en di-cha fase permitiriacutea el acceso aacutegil a los resultados facilitando que el procedimiento se nutra de datos reales y verificados

La consideracioacuten de principios de economiacutea ambien-tal aplicados a la optimizacioacuten de los recursos puacute-blicos y privados hace recomendable promover la interrelacioacuten entre los procesos de calidad de las empresas con la EIA poniendo en valor los que re-sulten complementarios

La retroalimentacioacuten de los procesos permitiriacutea in-troducir mejoras funcionales en el disentildeo de las me-didas correctoras de impacto ambiental reforzando directamente la utilidad del procedimiento de EIA Para solventar la actual falta de acceso por parte de los propios actores a los datos teoacutericamente exis-tentes por casi 25 antildeos de vigilancia y seguimiento ambiental en Espantildea se percibe que la creacioacuten de comisiones multidisciplinares resultariacutea una herra-mienta aacutegil y eficaz

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10Legislacioacuten

Carlos Iglesias Luis Balaguer Ignacio Mola y Valentiacuten Alfaya

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IacuteNDICE

CAPIacuteTULO 10 Legislacioacuten

Carlos Iglesias Luis Balaguer Ignacio Mola y Valentiacuten Alfaya

I INTRODUCCIOacuteN Y OBJETIVOS

En coherencia con el pragmaacutetico deseo general ex-presado en el resto del libro este capiacutetulo de Legis-lacioacuten se concibe con la idea de ofrecer una visioacuten comentada de normas relevantes cuyo contenido tiene influencia directa sobre el disentildeo de los tra-tamientos de restauracioacuten de infraestructuras de transporte su mantenimiento y el seguimiento de estas medidas correctoras confiando en que resul-ten de utilidad para los agentes que intervengan en las distintas fases de los procesos de planificacioacuten proyecto construccioacuten y explotacioacuten de las mismas si bien no es pretensioacuten de sus autores confeccionar un listado interminable sobre materia legal aplicable al aacutembito de las infraestructuras de transporte ni sobre su restauracioacuten o la de zonas afectadas por su ejecucioacuten y funcionamiento

Dicho enfoque responde al convencimiento de la escasa utilidad que hoy en diacutea tiene el formato tradicional de elaborar interminables listados de normas maacutes o menos relacionadas con la redac-cioacuten de proyectos no tanto por la inevitable ca-ducidad de muchas normas a corto y medio plazo como por las facilidades de acceso que ofrece In-ternet a numerosas paacuteginas web oficiales donde se ofrece dicha informacioacuten actualizada en tiempo real

En este capiacutetulo se pone de relieve la estrecha re-lacioacuten entre normas dispares y en ocasiones el conflicto que se genera entre distintas normas que

pueden determinar la toma de decisiones aunque a veces la falta de consideracioacuten de algunas de ellas compromete el eacutexito de las medidas correctoras como por ejemplo suele ocurrir cuando se ignoran las labores de conservacioacuten y mantenimiento que inevitablemente se realizan en algunas aacutereas restau-radas de las infraestructuras

En determinados aacutembitos profesionales la restau-racioacuten de los taludes y otras superficies alteradas se percibe como una tarea repetitiva cuyo disentildeo responde sistemaacuteticamente al mismo esquema con escasas diferencias seguacuten se trate de los taludes de terrapleacuten o desmonte lo cual dista mucho de la rea-lidad de la restauracioacuten ecoloacutegica de estas infraes-tructuras como se ha mencionado repetidamente en este libro Sin embargo cabe resaltar algunos obs-taacuteculos legales con los que se pueden encontrar los teacutecnicos a la hora de promover y defender algunas ideas novedosas en sus proyectos de restauracioacuten pese a que puedan basarse en los datos de expe-riencias previas o en la literatura cientiacutefica que em-pieza a abundar al respecto Es una responsabilidad de las Administraciones crear un marco favorable de actuacioacuten en el que se integren los distintos puntos de vista incentivando las decisiones motivadas y adecuadas a los fines establecidos en sus propias actuaciones y poliacuteticas

Antes de finalizar este apartado de introduccioacuten conviene recordar el artiacuteculo 45 de la Constitucioacuten

Espantildeola (en adelante CE) que preveacute la proteccioacuten del medio ambiente como labor de los poderes puacute-blicos velando por la utilizacioacuten racional de todos los recursos naturales con el fin de proteger y me-jorar la calidad de la vida y defender y restaurar el medio ambiente con el apoyo de la indispensable solidaridad colectiva Responsabilidades puacuteblicas ar-ticuladas en el punto 14819 de la CE que atribuye a las comunidades autoacutenomas la competencia de ges-tioacuten en materia de proteccioacuten del medio ambiente correspondiendo al Estado la competencia exclusiva para establecer la legislacioacuten baacutesica en dicha mate-ria (art 149123) Cabe destacar en el enunciado del citado artiacuteculo de la CE su acierto visionario al vincular la calidad de vida de los ciudadanos con la restauracioacuten del medio ambiente anticipaacutendose asiacute a la definicioacuten formal de los objetivos de la restau-racioacuten ecoloacutegica que actualmente se centran en la reposicioacuten de valores bienes y servicios a las pobla-ciones humanas

A continuacioacuten se agrupan las normas recopiladas con la filosofiacutea comentada en esta introduccioacuten para ello se han organizado seguacuten materias con la pretensioacuten de facilitar su consulta a los equipos re-dactores de proyectos Aunque en cada apartado se trata de respetar el orden jeraacuterquico de las normas quizaacutes parezca desordenado en alguacuten punto porque no en todas las materias existen normas a todos los niveles o bien no se han encontrado datos resentildea-bles en todas las normas que existen

II LEGISLACIOacuteN SECTORIAL CARRETERAS Y FERROCARRILES

1 Ideas baacutesicas

La CE atribuye al Estado la competencia exclusiva para establecer la legislacioacuten baacutesica entre otras ma-terias sobre ferrocarriles y transportes terrestres que transcurran por el territorio de maacutes de una comuni-dad autoacutenoma (art 149121) y ademaacutes la compe-tencia exclusiva en obras puacuteblicas de intereacutes general o cuya realizacioacuten afecte a maacutes de una comunidad autoacutenoma (art 149124) Teniendo en cuenta la or-ganizacioacuten del Estado y los procesos de descentra-lizacioacuten administrativa en materia de carreteras el marco legal se encuentra constituido por una Ley estatal de carreteras (Ley 251988 BOE nordm 182 de 30 de julio de 1988) un Reglamento de carreteras (RD 18121994 BOE nordm 228 de 23 de septiembre de 1994) que desarrolla la anterior junto a sus posterio-res modificaciones y diecisiete normas autonoacutemicas

con rango de ley en algunos casos desarrolladas por sus propios reglamentos y en otros complementa-das con decretos por los que se aprueban instruccio-nes teacutecnicas como por ejemplo las referentes a los firmes Aunque en el caso que nos ocupa resultaraacute de particular intereacutes rescatar maacutes adelante la Orden Ministerial de 21 de marzo de 1963 por la que se aprueba la Instruccioacuten de la Direccioacuten General de Carreteras 71 ndash IC sobre lsquoPlantaciones en las zonas de servidumbre de las carreterasrsquo auacuten en vigor pese al olvido al que se encuentra sometida quizaacutes por obsoleta y por resultar de escasa aplicabilidad a los proyectos de las modernas carreteras

Finalmente el artiacuteculo 40 del Reglamento Gene-ral de Carreteras (RD 18121994) establece que sin perjuicio de los reglamentos teacutecnicos de aacutem-bito general que sean de aplicacioacuten el ahora

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IacuteNDICE

denominado Ministerio de Fomento a propuesta de la Direccioacuten General de Carreteras aprobaraacute las normas e instrucciones teacutecnicas a las que de-ban sujetarse los trabajos y obras de construc-cioacuten de las carreteras estatales las cuales debe-raacuten revisarse perioacutedicamente para su actualizacioacuten permanente debieacutendose publicar estas normas e instrucciones en el Boletiacuten Oficial del Estado De este modo la Administracioacuten competente dota de la fuerza necesaria al compendio de normas e ins-trucciones de carreteras que perioacutedicamente se revisan y actualizan Siendo su observancia obli-gatoria por Ley de esta forma determinados cri-terios teacutecnicos prevalecen faacutecilmente sobre otras normas o recomendaciones opuestas o incompati-bles de menor rango o susceptibles de una inter-pretacioacuten maacutes flexible como suele ser frecuente en materia ambiental

2 El paisaje desde las infraestructuras de transporte el entorno en sentido amplio

El empleo de diferentes escalas de trabajo a la hora de considerar el entorno de las infraestructuras de transporte resulta determinante para comprender sus efectos sobre el medio En este sentido desde hace ya bastantes antildeos en la literatura cientiacutefica abundan los trabajos que promueven el enfoque sisteacutemico a diferentes escalas para comprender los posibles procesos afectados base de buena parte de los contenidos de los capiacutetulos anteriores de este libro

En sentido inverso simultaacuteneamente proliferan los trabajos de interpretacioacuten y acceso al paisaje desde las infraestructuras de transporte En este aacutembito ha adquirido notable relevancia la Ley 51996 de Carreteras de Cantabria (BOE nordm 51 de 28 de fe-brero de 1997) que en su artiacuteculo 26 preveacute que puedan ser declaradas como carreteras o tramos de especial proteccioacuten entre otros las carreteras o tramos parciales de importancia por su funcioacuten te-rritorial o debido a sus condiciones medioambien-tales Debiendo ser declaradas en cualquier caso como carreteras singulares de especial proteccioacuten ecoloacutegica y paisajiacutestica aquellas que atraviesen es-pacios naturales protegidos afecten a bienes de intereacutes cultural puedan alterar las condiciones de los paisajes naturales o culturales preexistentes o pongan en peligro los testimonios etnograacuteficos de la cultura material popular

En coherencia con ello en la Comunidad Autoacutenoma de Cantabria ademaacutes han promulgado el Decreto 612004 sobre carreteras de especial proteccioacuten por atravesar espacios naturales protegidos de Can-tabria (BOC nordm 121 de 24 de junio de 2004) donde se contempla que para la definicioacuten de las medidas de integracioacuten ambiental se deacute prioridad al empleo de la vegetacioacuten como elemento constructivo de manera aislada o en combinacioacuten con materiales inertes asiacute como al uso de materiales tradicionales de cada zona

Otro caso destacable es el de la Comunidad Au-toacutenoma de Andaluciacutea que cuenta con un cataacute-logo de 44 carreteras paisajiacutesticas que se ex-tienden a lo largo de 1666 km de recorrido y contempla que con el objeto de conservar o potenciar el caraacutecter paisajiacutestico de las carrete-ras destinadas a acoger funciones relacionadas con el acceso y disfrute del paisaje se planteen dos posibles estrategias a implementar en los proyectos de adecuacioacuten y mejora de estas in-fraestructuras

La primera de ellas se basa en la utilizacioacuten de disentildeos materiales y soluciones teacutecnicas que alu-dan a patrones o caracteriacutesticas formales reconoci-bles en el entorno viario mientras que la segunda pasa por mejorar el diaacutelogo entre la carretera y determinados elementos singulares situados en sus maacutergenes construcciones tradicionales arbo-lado en las maacutergenes muros de piedra etc (CEPT 2009)

En otro aacutembito geograacutefico con base en la Ley 21983 de alta montantildea (DOGC n 312 del 16 de marzo de 1983) de la Generalidad de Cataluntildea se han elaborado las recomendaciones teacutecnicas para el disentildeo sostenible de carreteras de montantildea con el objeto de que la dotacioacuten de infraestruc-turas en este medio no resulte en detrimento de los valores naturales del entorno ni del potencial turiacutestico de la propia infraestructura En ellas se efectuacutea una serie de recomendaciones sobre los elementos que conforman las carreteras a menu-do por debajo de los umbrales que fija la Norma 31-IC de trazado tratando de no renunciar por ello a la seguridad

Por uacuteltimo aunque no constituyen un texto legal la Junta de Andaluciacutea ha elaborado a traveacutes de la empresa puacuteblica GIASA dependiente de la Con-sejeriacutea de Obras Puacuteblicas unas recomendaciones teacutecnicas para el disentildeo y ejecucioacuten de sistemas viarios en medios sensibles con el objeto de ser considerado por proyectistas y teacutecnicos durante la fase de obras de estas infraestructuras (JAOPGIASA 2006)

3 El entorno inmediato de las infraestructuras de transporte dominio puacuteblico y zonas de servidumbre

Tanto la legislacioacuten baacutesica de carreteras como la del sector ferroviario establecen en el aacutembito de influencia de dichas infraestructuras la existencia de unas zonas de dominio puacuteblico de servidumbre y de afeccioacuten En estas zonas de proteccioacuten quedan condicionados numerosos usos en funcioacuten de su compatibilidad con los elementos funcionales de las infraestructuras por ejemplo las plantaciones o talas de aacuterboles estando sometidos en algunos casos a la preceptiva autorizacioacuten de la Administra-cioacuten competente Por razoacuten del reacutegimen juriacutedico al que estaacuten sujetos los bienes y derechos que inte-gran el patrimonio de las Administraciones puacuteblicas pueden ser de dominio puacuteblico o demaniales y de dominio privado o patrimoniales de acuerdo con la Ley 332003 del Patrimonio de las Administra-ciones Puacuteblicas (BOE nordm 264 de 4 de noviembre de 2003) Los bienes y derechos de dominio puacuteblico son los que siendo de titularidad puacuteblica se en-cuentren afectados al uso general o al servicio puacute-blico asiacute como aquellos a los que una ley otorgue expresamente el caraacutecter de demaniales

Cuadro 1 Entre otros principios la gestioacuten y administracioacuten de los bienes y derechos patrimoniales por las Administraciones puacuteblicas deben ajustarse a los siguientes

a) Eficiencia y economiacutea en su gestioacuten

b) Eficacia y rentabilidad en su explotacioacuten

c) Transparencia y objetividad en su explotacioacuten

d) Identificacioacuten y control a traveacutes de inventarios o registros adecuados

e) Colaboracioacuten y coordinacioacuten entre las diferen-tes Administraciones puacuteblicas con el fin de optimizar la utilizacioacuten y el rendimiento de sus bienes

Figura 1 La autoviacutea A-4 a su paso por el paisaje singular del desfilade-

ro de Despentildeaperros en la provincia de Jaeacuten (Foto Carlos Iglesias)

Figura 2 El mantenimiento de vegetacioacuten arbustiva en el dominio puacuteblico permite conectar distintos rodales y pasos de fauna en la imagen un tramo de la autoviacutea A-52 (Foto Carlos Iglesias)

La defensa y proteccioacuten del patrimonio de las Adminis-traciones puacuteblicas es una obligacioacuten inherente a ellas siendo la conservacioacuten de los bienes y derechos de dominio puacuteblico competencia del Ministerio u organis-mo puacuteblico al que se encuentren afectados o adscritos o al que corresponda su administracioacuten La Ley preveacute que en el caso de que sobre un bien se impongan una o varias afectaciones concurrentes la participacioacuten de los diversos departamentos u organismos en la con-servacioacuten se podraacute determinar mediante acuerdos o protocolos de actuacioacuten entre ellos (en su defecto la forma de participacioacuten de cada uno la fijariacutea el ministro de Hacienda) Y por uacuteltimo otro aspecto de relevancia a incluir en esta introduccioacuten como mucha gente bien conoce seguacuten el reacutegimen de disponibilidad los bienes y derechos de dominio puacuteblico son inalienables im-prescriptibles e inembargables

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IacuteNDICE

Tabla 1 El dominio puacuteblico viario y las limitaciones a la propiedad en carreteras y ferrocarriles

INFRAESTRUCTURA Y CONSIDERACIONES

DOMINIO PUacuteBLICO

ZONA DE SERVIDUMBRE

LIacuteMITE DE EDIFICACIOacuteN

ZONA DE AFECCIOacuteNPROTECCIOacuteN

Autopistas autoviacuteas y viacuteas raacutepidas

8 metros 25 metros 50 metros 100 metros

Carreteras convencionales

3 metros 8 metros 25 metros 50 metros

Ferrocarriles 8 metros ---------- 50 metros 70 metros

ConsideracionesProhibido plantaciones de arbolado

Autorizable plantaciones de arbolado

----------Autorizables plantaciones de arbolado

Tabla 2 Particularidades sobre el dominio puacuteblico viario y las limitaciones a la propiedad en carreteras

DOMINIO PUacuteBLICO

ASTURIAS Se permiten cultivos y zonas ajardinadas de talla inferior a 05 metros

EXTREMADURA Anchura de 2 m en las carreteras denominadas vecinales

NAVARRA No son autorizables las plantaciones de arbolado

GALICIA No podraacute exceder 15 m de ancho en autopistas autoviacuteas corredores y viacuteas raacutepidas y 10 m de ancho en el resto de las carreteras

ZONA DE SERVIDUMBRE

ISLAS BALEARES Denominada zona de proteccioacuten (18 m de anchura en carreteras de dos carriles de la red primaria y secundaria y de 8 m las de la red local o rural)

CANTABRIADenominada zona de proteccioacuten (18 m en carreteras primarias 14 m en carreteras secundarias y 10 m en las locales)

GALICIA Y NAVARRA Mide 17 m en autopistas autoviacuteas corredores y viacuteas raacutepidas y 2 m en el resto de las carreteras de Galicia desde el dominio puacuteblico y 5 m en el resto de las de Navarra

CATALUNtildeA Se permiten cerramientos arbustivos de talla inferior a 120 m

REGIOacuteN DE MURCIA Se considera 30 m de ancho para las carreteras de segundo y tercer nivel

LIacuteMITE DE EDIFICACIOacuteN

ANDALUCIacuteA Se extiende hasta los 100 m

CASTILLA Y LEOacuteN Posee una anchura de 18 m en carreteras que no sean autopistas autoviacuteas ni viacuteas raacutepidas

LA RIOJA Posee una anchura de 18 m en carreteras que no sean autopistas autoviacuteas ni viacuteas raacutepidas

NAVARRA Posee una anchura de 18 m en carreteras locales

REGIOacuteN DE MURCIA Posee una anchura de 18 m en carreteras de tercer nivel

GALICIA Mide 30 m de autopistas autoviacuteas y viacuteas raacutepidas 12 m en carreteras de la red primaria baacutesica 195 m las de la red primaria complementaria y 7 m en el resto

VIZCAYA Mide 18 m en la red comarcal y complementaria de Vizcaya y 12 m en la red local

ZONA DE AFECCIOacuteN

CASTILLA-LA MANCHA

Denominada zona de proteccioacuten mide 30 m de anchura en carreteras que no sean autopistas autoviacuteas ni viacuteas raacutepidas

ANDALUCIacuteA CASTILLA Y LEOacuteN GALICIA Y VIZCAYA

Mide 25 m en el resto de carreteras

GUIPUacuteZCOA Denominada zona de proteccioacuten mide 30 m de anchura en carreteras que no sean autopistas autoviacuteas ni viacuteas raacutepidas y se prohiacutebe la plantacioacuten y tala de aacuterboles y arbustos Mide 10 m en el caso de caminos

NOTA en la Comunidad de Madrid se establecen solo dos zonas el dominio puacuteblico y la zona de proteccioacuten que posee un ancho de 50 metros en autopistas y autoviacuteas 25 m en las carreteras integradas en la red principal y 15 m en el resto de las redes de la Comunidad de Madrid medidos desde la arista exterior de explanacioacuten

Figura 3 Caracteriacutesticas baacutesicas del dominio puacuteblico viario y las limitaciones a la propiedad en carreteras y ferrocarriles (modificado de Igle-sias Merchaacuten y Herrera Calvo 2008)

DOMINIO PUacuteBLICO anchura variable (8 m tronco de autoviacuteas autopistas viacuteas raacutepidas y FFCC 3 m ctra convencional caminos servicio etc)

DOMINIO PUacuteBLICO

INTERIOR DE LA INFRAESTRUCTURA

ZONA DE AFECCIOacuteN EN CARRETERAS

100 m (50 m ctra convencional)

ZONA DE PROTECCIOacuteN EN FFCC

70 m

LIacuteMITE DE EDIFICACIOacuteN EN CARRETERAS Y FFCC

50 m (25 m ctra convencional)

ZONA DE SERVIDUMBRE EN CARRETERAS

25 m (8 m ctra convencional)

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IacuteNDICE

Ademaacutes de las anteriores referencias al dominio puacute-blico y las limitaciones a la propiedad merece la pena resentildear algunas particularidades relacionadas con el manejo y la gestioacuten de estas zonas y la res-tauracioacuten de las infraestructuras de transporte que se incluyen en algunas normas autonoacutemicas El artiacute-culo 6 de la Ley 82001 de Carreteras de Andaluciacutea (BOJA nordm 85 de 26-7-2001) establece expliacutecitamen-te que la zona de dominio puacuteblico adyacente a las carreteras deberaacute quedar debidamente amojonada e integrada en su medio natural mediante la im-plantacioacuten en ella de las correspondientes actua-ciones de restauracioacuten paisajiacutestica Su artiacuteculo 31 iacutentegramente dedicado al proyecto de restauracioacuten paisajiacutestica establece que se realizaraacute la revegeta-cioacuten del dominio puacuteblico viario y de su entorno sin que necesariamente tenga que estar vinculada su redaccioacuten y ejecucioacuten a las obras de carreteras ni a la contratacioacuten del proyecto de construccioacuten idea no solo aplicada al caso de Andaluciacutea

La segregacioacuten de un proyecto de restauracioacuten respecto del proyecto de construccioacuten de una in-fraestructura es objeto de debate desde hace mu-cho tiempo sin que se conozcan los resultados ni valoraciones de las experiencias realizadas en ocasiones promovidas en aacutembitos geograacuteficos dis-tintos de Andaluciacutea En todo caso es una cuestioacuten contradictoria con la esencia de la EIA que preci-samente pretende que los proyectos de restaura-cioacuten de las actividades evaluadas formen parte de los proyectos de construccioacuten si bien la Ley an-daluza emplea dos teacuterminos integracioacuten ambien-tal y restauracioacuten paisajiacutestica con la intencioacuten de establecer una diferencia entre la ejecucioacuten de las medidas preventivas y correctoras establecidas en la declaracioacuten ndasho informendash de impacto ambien-tal (integracioacuten ambiental) de aquellas otras adi-cionales que persigan la revegetacioacuten del dominio puacuteblico viario y del entorno afectado (restauracioacuten paisajiacutestica) Para ello la legislacioacuten andaluza pre-veacute que la Administracioacuten pueda utilizar la zona de servidumbre para cuantas actuaciones requiera el intereacutes general y el mejor servicio del dominio puacuteblico viario incluida la integracioacuten paisajiacutestica de la carretera

En este sentido la Ley de Carreteras de la Comuni-dad de Madrid (Ley 31991 BOCM de 21 de marzo de 1991) incluye una referencia al medio ambiente en la fase de su explotacioacuten pues en su artiacuteculo 25 determina que a la explotacioacuten de las carreteras comprende entre otras labores las de restauracioacuten y proteccioacuten medioambientales necesarias y estable-cidas en el ordenamiento juriacutedico vigente

Respecto a la posibilidad de autorizarse la plantacioacuten o tala de aacuterboles en zonas de servidumbre y afeccioacuten de las carreteras destaca la mencioacuten adicional a los arbustos en el Decreto Foral Normativo 12006 de Carreteras y Caminos de Gipuzkoa (BOG nordm 117 de 21 de junio de 2006) recogido en la tabla 2

Tambieacuten se puede destacar como una referencia a los efectos sobre el medio ambiente de las carrete-ras durante su fase de explotacioacuten el artiacuteculo 28 de la Ley 22008 de Carreteras de la Regioacuten de Murcia (BORM nordm 111 de 14 de mayo de 2008) que faculta a la consejeriacutea competente en materia de carreteras para ordenar el traacutefico (aunque solo el traacutefico pesa-do) por motivos ambientales entre otros

Figura 4 Algunas carreteras se caracterizan por un denso traacutefico de vehiacuteculos pesados La Legislacioacuten de la Regioacuten de Murcia permite su ordenacioacuten en funcioacuten de criterios de caraacutecter ambiental Imagen de la carretera N-232 en La Rioja (Foto Carlos Iglesias)

Aunque la norma que se muestra particularmente in-fluyente sobre los usos del suelo en su entorno es la Ley 51990 de Carreteras de la Comunidad Autoacuteno-ma de las Islas Baleares (BOE nordm 184 de 2 de agosto de 1990) puesto que preveacute que los planes de carre-teras o los urbaniacutesticos que incluyan carreteras fijen en su caso una zona de reserva para ampliacioacuten o mejora de las carreteras cuya anchura miacutenima seraacute

a) 100 metros para viacuteas de cuatro o maacutes carriles

b) 50 metros para viacuteas de dos carriles de las redes primaria y secundaria

c) 25 metros para viacuteas de dos carriles de las redes local o rural

En la zona de reserva se prohibiraacute la ejecucioacuten de cualquier tipo de obra o instalacioacuten que no sean las de mera conservacioacuten de las existentes y tam-bieacuten cualquier otra clase de actividades que puedan

elevar el valor del suelo excepto los de cultivos agriacute-colas Ademaacutes las anchuras descritas se incremen-taraacuten en un 50 cuando se trate de carreteras de nuevo trazado

Sin embargo en Baleares se contempla que las la-bores agriacutecolas no tengan ninguna restriccioacuten fuera de la zona de dominio puacuteblico excepto en el caso de que con ellas pueda verse comprometido el traacute-fico en concreto Solo en este caso seraacute preceptiva la autorizacioacuten del organismo titular de la carretera para la plantacioacuten o tala de arbolado y la recogida y evacuacioacuten de los productos cuando se realicen a una distancia menor de 3 metros de la arista de la explanacioacuten y esta pueda verse afectada

4 Plantaciones en las zonas de servidumbre de las carreteras Instruccioacuten 71-IC

En la introduccioacuten de este mismo capiacutetulo se ha in-cluido una breve referencia al marco general legal en materia de infraestructuras de transporte par-ticularmente en el caso de las carreteras Conviene recordar que la legislacioacuten baacutesica del Estado Ley y Reglamento de Carreteras tienen continuidad en diecisiete normas autonoacutemicas con rango de ley En algunos casos desarrolladas por sus propios regla-mentos y ademaacutes complementadas ambos con de-cretos y oacuterdenes por las que se aprueban por ejem-plo instrucciones teacutecnicas de obligado cumplimien-to en distintas fases de la planificacioacuten proyecto y explotacioacuten de las infraestructuras de transporte En este sentido resulta de particular intereacutes en este

La instruccioacuten 71-IC establece una serie de normas y recomendaciones a tener en cuenta en las plantaciones que se efectuacuteen en la zona de servidumbre de las carre-teras a las que atribuye funciones ligadas a una concep-cioacuten de los trazados y de la conduccioacuten propias de hace cuatro deacutecadas como orientar el traacutefico proporcionar zonas de sombra y descanso a los viajeros y de orden esteacutetico como es la integracioacuten de las carreteras en el paisaje que atraviesa la valoracioacuten de determinados puntos de vista o la ocultacioacuten de aquellos que no resul-taran agradables Sin embargo tambieacuten atribuye a las plantaciones a lo largo de las carreteras la posibilidad de cumplir simultaacuteneamente otras funciones como conte-ner taludes y evitar la erosioacuten Como aspectos singulares de la norma destaca la recomendacioacuten de no plantar aacuterboles cuando la carretera atraviese o esteacute proacutexima a bosques o plantaciones de frutales y en todo caso que las plantaciones permitan la visioacuten del paisaje

Figura 5 Algunas declara-ciones de impacto ambien-tal establecen la condicioacuten de proyectar plantaciones arboacutereas para ocultar ele-mentos constructivos como pilares pantallas acuacutesticas etc pese a situarse en una zona donde la legislacioacuten vigente prohiacutebe este tipo de restauraciones (Foto Carlos Iglesias)

libro recordar la existencia de la Orden Ministerial de 21 de marzo de 1963 por la que se aprueba la Instruccioacuten de la Direccioacuten General de Carreteras 71-IC sobre lsquoPlantaciones en las zonas de servidumbre de las carreterasrsquo

Esta norma auacuten permanece en vigor pese al ol-vido al que se encuentra sometida por lo que convendriacutea recordar que el Reglamento General de Carreteras (RD 18121994) contempla la nece-sidad de revisar perioacutedicamente para su actua-lizacioacuten permanente las normas e instrucciones teacutecnicas a las que deban sujetarse los trabajos y obras de construccioacuten de las carreteras esta-tales

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Figura 6 Primera paacutegina de la instruccioacuten de carreteras 71-IC publicada en el BOE de 8 de abril de 1963 y actualmente vigente Sus carac-teriacutesticas histoacutericas compensan la pobreza graacutefica de la figura pero no la escasa aplicabilidad de la norma

Aunque es una norma desactualizada difiacutecilmen-te aplicable a las modernas infraestructuras de transporte estaacute salpicada de frases de completa vigencia como la importancia que otorga a la ar-monizacioacuten de la infraestructura con el paisaje particularmente en aquellas zonas caracterizadas por la ausencia de vegetacioacuten Tambieacuten es cierto que resalta la importancia de una adecuada selec-cioacuten de especies tanto en lo que a su funcioacuten se refiere como a su conservacioacuten recomendaacutendose la adopcioacuten de las especies caracteriacutesticas de la regioacuten

La existencia de una norma de casi 40 antildeos de anti-guumledad dedicada a establecer los principios baacutesicos de la integracioacuten ambiental de las infraestructuras de transporte en Espantildea en un hecho singular que revela la intencioacuten renovadora y probablemente el empuje de un grupo de teacutecnicos comprometidos en su esfuerzo por comprender la relacioacuten de las infraestructuras de transporte con su entorno casi 25 antildeos antes de la transposicioacuten al ordenamien-to juriacutedico espantildeol de las primeras Directivas euro-peas en materia de evaluacioacuten ambiental En todo caso teniendo en cuenta los ritmos del progreso el periacuteodo de tiempo transcurrido y la inevitable caducidad de las normas cuando dejan de ajustarse a la realidad cambiante convendriacutea recordar a las Administraciones sus responsabilidades en cuanto a

la necesaria revisioacuten de las normas para su adecua-cioacuten al progreso teacutecnico y cientiacutefico

5 Instrucciones y Recomendaciones en los proyectos de alta velocidad

El Administrador de Infraestructuras Ferroviarias (ADIF) es una entidad puacuteblica empresarial depen-diente del Ministerio de Fomento que entre sus en-comiendas tiene la redaccioacuten de proyectos cons-truccioacuten y puesta en servicio entre otras de las liacuteneas de alta velocidad Como parte integrante del Sistema de Gestioacuten de la Calidad adoptado por el ADIF se encuentran las Instrucciones y Recomen-daciones para la redaccioacuten de los proyectos de la plataforma de liacuteneas de alta velocidad ferroviaria conocidas como IGP cuya uacuteltima revisioacuten se ha lle-vado a cabo durante el antildeo 2010 para actualizar las hasta ahora denominadas IGP-2008 Con ellas se pretende favorecer la homogeneidad en la interpre-tacioacuten a los criterios aplicados por los proyectistas asiacute como facilitar la actualizacioacuten ordenacioacuten y ar-chivo sistemaacutetico de las instrucciones que con este fin se distribuyen y actualizan por el propio ADIF perioacutedicamente Maacutes recientemente la DG de Infra-estructuras Ferroviarias del Ministerio de Fomento estaacute desarrollando a semejanza de las citadas IGP un manual para la redaccioacuten de proyectos si bien

en este capiacutetulo se detallan algunos aspectos de las IGP de ADIF maacutes utilizadas hasta la fecha

Los redactores de proyectos quedan obligados a consultar estas Instrucciones y Recomendaciones y en caso necesario soliciten del ADIF las aclaraciones oportunas no tanto en la interpretacioacuten y aplicacioacuten de la normativa oficialmente vigente sino por los posibles conflictos con el texto de algunas declara-ciones de impacto ambiental

Cuadro 2 El capiacutetulo 6 de las IGP estaacute reservado al medio ambiente y consta de los siguientes documentos a considerar durante la redaccioacuten de un proyecto de construccioacuten

IGP-61 Guiacutea de prescripciones ambientales para los proyectos de construccioacuten

IGP-62 Programa tipo de vigilancia ambiental

IGP-63 Criterios para la valoracioacuten del coste ambiental

IGP-64 Estudio para la prevencioacuten de ruidos y vibraciones

Estas Instrucciones contienen una relacioacuten de criterios teacutecnicos que sirven de directrices para la coordinacioacuten en el disentildeo de las medidas de proteccioacuten y correc-cioacuten ambiental de los proyectos de las liacuteneas de alta velocidad estructurados seguacuten los principales facto-res ambientales que se contemplan habitualmente en las DIA del Ministerio de Medio Ambiente y ahora tambieacuten de Medio Rural y Marino Las directrices de coordinacioacuten constituyen un intento ambicioso por servir de marco general de homogeneizacioacuten en la redaccioacuten de proyectos aunque sin descender a deta-lles de disentildeo teacutecnico que entran en la competencia de los respectivos proyectistas Por ejemplo en el apartado dedicado a la recuperacioacuten y utilizacioacuten de tierra vegetal queda definida esta como todo aquel material procedente de excavacioacuten cuya composicioacuten fiacutesico-quiacutemica y granulomeacutetrica permita el estableci-miento de una cobertura herbaacutecea permanente (al menos inicialmente mediante las teacutecnicas habituales de hidrosiembra) y sea susceptible de recolonizacioacuten natural Se preveacute su retirada selectiva mantenimiento y conservacioacuten Sin embargo se sigue proponiendo la reextensioacuten de un espesor promedio de 30 cm de tierra vegetal sobre las superficies a restaurar cues-tioacuten discutida desde hace tiempo y sobre la que se aclaran bastantes ideas preconcebidas al respecto en el capiacutetulo 4 de este libro

Figura 7 Las directrices de coordinacioacuten constituyen un intento ambicioso por servir de marco general de homogeneizacioacuten en la redaccioacuten de proyectos de liacuteneas de alta velocidad Imagen de un tren saliendo de un falso tuacutenel de la liacutenea Madrid-Valladolid junto al monte de El Pardo (Foto Carlos Iglesias)

En las IGP ocupan un espacio destacado todas las medidas a proyectar en relacioacuten con la proteccioacuten de la fauna en especial se incluyen referencias expliacutecitas para incorporar al proyecto los criterios de los docu-mentos para la reduccioacuten de la fragmentacioacuten de haacute-bitats del Ministerio de Medio Ambiente y Medio Rural y Marino (MMA 2006 MARM 2008 y MARM 2010)

En cuanto a la restauracioacuten vegetal se refiere se contempla que en cada caso se tendraacute que ser coherente tanto desde el punto de vista ecoloacutegico como paisajiacutestico con el territorio atravesado pre-tendiendo que se trate el terreno alterado y espe-cialmente los taludes con el aspecto y composicioacuten vegetal predominante lo maacutes parecidos posible a los existentes antes de las obras Los tratamientos muy intensivos maacutes propios de jardineriacutea se reservan para zonas urbanas o periurbanas el resto de los tratamientos vegetales deberaacute integrarse adecuada-mente en el medio atravesado

A la restauracioacuten vegetal se le otorgan los objetivos ecoloacutegicos paisajiacutesticos (integracioacuten y ocultacioacuten de vistas poco esteacuteticas) y de control de la erosioacuten de las superficies desnudas generadas por las obras Ademaacutes se recomienda la realizacioacuten de estudios en detalle de la vegetacioacuten a lo largo de la traza para lo-calizar la flora de intereacutes para su proteccioacuten y detectar las especies del lugar susceptibles de ser utilizadas en la revegetacioacuten Respecto a la seleccioacuten de espe-cies se incluye una serie de factores a considerar si bien auacuten se permanece lejos de reflejar la necesidad y el modo en que se debe acopiar este material de la propia zona con la antelacioacuten suficiente

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IacuteNDICE

Figura 8 Ejemplares de Erodium celtibericum en un vivero de obra en alta montantildea (Fuente Castellana Ribas y Riaza Lujaacuten 2010) (Foto FOLIA Consultores)

Aunque se proponen diversos modelos de restaura-cioacuten tambieacuten se recuerda que las plantaciones ar-boacutereas propuestas en proyecto deberaacuten adecuarse al RD 23872004 es decir al Reglamento del Sector Fe-rroviario (BOE nordm 315 de 31 de diciembre de 2004) Esto significa que se prohiacutebe la plantacioacuten de arbo-lado en zona de dominio puacuteblico de acuerdo con el artiacuteculo 30 apartado 2a si bien podriacutean autorizarse

en la zona de proteccioacuten aunque esta excede las po-sibilidades del proyecto y del propio administrador de la infraestructura a los efectos de su restauracioacuten ambiental Las IGP tambieacuten establecen la obligacioacuten de hacer un inventario del arbolado autoacutectono de intereacutes afectado debieacutendose atender a su tamantildeo estado y posibilidades de arraigo tras su trasplan-te consideracioacuten que no deberiacutea interpretarse como la obligacioacuten de proponer en proyecto el trasplante indiscriminado en nuacutemero y especies de cualquier ejemplar afectado por la construccioacuten de estas infra-estructuras

En su apartado 282 las IGP ofrecen una serie de criterios para el mantenimiento de la vegetacioacuten im-plantada en zonas restauradas donde se sugieren incluso las labores de riego abonados escardas binas y podas recordando la importancia de que todos estos trabajos tengan su reflejo apropiado en el correspondiente capiacutetulo del presupuesto del proyecto En todo caso la confeccioacuten de unas ins-trucciones actualizadas perioacutedicamente permite la incorporacioacuten de criterios adecuados a la realidad de los proyectos de las liacuteneas de alta velocidad que ademaacutes se pueden extrapolar a otras infraestructu-ras de transporte

III TEMAS AMBIENTALES

1 Evaluacioacuten ambiental

La Directiva comunitaria 85337CEE (DO L 17540 de 5 de julio de 1985) considera entre otros aspec-tos que los efectos de un proyecto sobre el medio ambiente deben evaluarse para proteger la salud humana contribuir mediante un mejor entorno a la calidad de vida velar por el mantenimiento de la diversidad de especies y para conservar la capacidad de reproduccioacuten del sistema como recurso funda-mental de la vida La incorporacioacuten en Espantildea de esta Directiva 85337CEE al Derecho interno estatal se efectuoacute mediante el RDL 13021986 (BOE nordm 155 de 30 de junio de 1986) que experimentoacute sucesivas modificaciones y el Reglamento que lo desarrolla el RD 113188 (BOE nordm 239 de 5 de octubre de 1988) Con posterioridad el RDL 12008 (BOE nordm 23 de 26 de enero de 2008) por el que se aproboacute el texto re-fundido de Ley de evaluacioacuten de impacto ambiental (EIA) de proyectos derogaba el RDL 13021986 y sus modificaciones y finalmente el RDL 12008 ha sido a su vez modificado por la reciente Ley 62010 (BOE nordm 73 de 25 de marzo de 2010) Simultaacuteneamente

la Directiva 85337CEE ha sido modificada por las Directivas 9711CE (DO L 73 de 14 de marzo de 1997) y 200335CE (DO L 56 de 25 de junio de 2003)

En la actualidad praacutecticamente la totalidad de los proyectos de infraestructuras de transporte puacutebli-cos y privados que correspondan a autopistas y autoviacuteas viacuteas raacutepidas y carreteras convencionales de nuevo trazado modificacioacuten del trazado o du-plicaciones de calzada de otras existentes en una longitud continuada de maacutes de 10 km y las liacuteneas de ferrocarril para traacutefico de largo recorrido deben someterse a EIA en la forma prevista en la Ley mien-tras que la obligatoriedad de someter a EIA el resto de carreteras y liacuteneas ferroviarias que quedan fuera del aacutembito competencial del Estado y no reuacutenan las anteriores caracteriacutesticas se determina en las corres-pondientes normativas autonoacutemicas

De modo general el proyecto para el tratamiento de los espacios afectados por las obras se articu-la en torno a los potenciales impactos ambientales

Desde los Reales Decretos 13021986 y 11311988 se establece que las EIA deben proponer las actuacio-nes necesarias para evitar reducir o compensar los efectos ambientales negativos significativos Estas acciones reciben el nombre de medidas preventivas (o protectoras) correctoras y compensatorias res-pectivamente La legislacioacuten baacutesica de EIA sumada a sus homoacutelogas autonoacutemicas extiende el dominio de aplicacioacuten de estas definiciones al aacutembito de las infraestructuras lineales que desde el punto de vis-ta de la ecologiacutea de la restauracioacuten en el antildeo 1998 se definiacutea como un gigante dormido por Forman y Alexander gigante por la extensioacuten de superficie afectada y la trascendencia de la adopcioacuten de crite-rios ecoloacutegicos y dormido por la exigua repercusioacuten de sus planteamientos aseveraciones difiacuteciles de mantener en la actualidad

2 Responsabilidad ambiental

El reciente reacutegimen europeo de responsabilidad am-biental uno de los cambios maacutes relevantes del de-recho ambiental europeo en los uacuteltimos antildeos pue-de tener implicaciones muy relevantes en materia de restauracioacuten ecoloacutegica Aunque la obligacioacuten de restaurar el medio natural afectado por un dantildeo ya estaba presente en la legislacioacuten ambiental su dis-persioacuten por todo el reacutegimen sectorial haciacutea difiacutecil su efectiva puesta en praacutectica Con el nuevo reacutegimen transpuesto a nuestro ordenamiento juriacutedico por me-dio de la Ley 262007 (BOE nordm 255 del 24 octubre 2007) y el RD 20902008 (BOE nordm 308 del 23 de diciembre de 2008) un operador que ha causado un dantildeo significativo tiene la obligacioacuten de reparar este dantildeo y restaurar el medio afectado con una respon-sabilidad que en teacuterminos econoacutemicos es ilimitada

El otro aspecto relevante consiste en que tal repara-cioacuten no puede hacerse de cualquier modo sino que debe asegurar el retorno de los sistemas naturales hasta lo que se define en el texto normativo como lsquoestado baacutesicorsquo esto es lsquoaquel en el que de no ha-berse producido el dantildeo medioambiental se habriacutean hallado los recursos naturales y los servicios en el momento en que sufrieron el dantildeorsquo Desde nues-tro punto de vista esta definicioacuten juriacutedica estaacute muy proacutexima al concepto de lsquorestauracioacuten ecoloacutegicarsquo y abre el reto de la restauracioacuten de los procesos eco-loacutegicos como leit motiv de estas actuaciones

En los uacuteltimos cuatro antildeos se declararon a las com-pantildeiacuteas de seguros casi dos centenares de sinies-tros que implicaban un dantildeo ambiental relevante Una parte importante de ellos requirioacute medidas de

restauracioacuten del lsquomedio naturalrsquo Una vez que el nue-vo reacutegimen ha entrado en vigor es razonable pensar que en los proacuteximos antildeos se mantengan o incremen-ten los procedimientos administrativos para exigir la obligacioacuten de restaurar y que esta exigencia legal se convierta en una palanca que extienda la restaura-cioacuten con criterios ecoloacutegicos como alternativa viable a los enfoques maacutes tradicionales

3 Biodiversidad

Desde el punto de vista de la planificacioacuten de infra-estructuras resulta obligatorio incluir una referencia al Plan Estrateacutegico de Infraestructuras y Transporte 2005-2020 (PEIT) que define las poliacuteticas que de-ben orientar los proyectos y las grandes liacuteneas de actuacioacuten Este Plan va acompantildeado de un estudio acerca de los efectos conjuntos que ocasionariacutea el PEIT sobre espacios naturales protegidos haacutebitats de intereacutes comunitario y especies fauniacutesticas de inte-reacutes de conformidad con la Directiva 9243 (DO L 206 de 2271992) conocida como Directiva Haacutebitats y la Directiva 79409 (DO L 103 de 2541979) popu-larmente denominada Directiva Aves

Aunque la escala de la planificacioacuten difiere nota-blemente de la que requiere el disentildeo de medidas correctoras al nivel de detalle de un proyecto de construccioacuten no debe obviarse el desarrollo de planes y programas que en ocasiones han adop-tado un enfoque ambiental Este cambio de escala ha sido promovido por la Directiva Haacutebitats la cual insta en su artiacuteculo 10 a fomentar la co-nexioacuten y coherencia ecoloacutegica de la Red Natura 2000 Frente a las medidas que con frecuencia se limitan a la actuacioacuten en franjas laterales es-tos planes y programas se interesan por el efec-to fragmentador de las infraestructuras y por su afeccioacuten a corredores ecoloacutegicos que manteniacutean la conexioacuten entre espacios naturales En el caso del PEIT en el que se basa el actual Plan Extraordi-nario de Infraestructuras (PEI) se valoroacute positiva-mente que no solo evaluara la afeccioacuten directa y ocupacioacuten del territorio sino tambieacuten la fragmen-tacioacuten de haacutebitats utilizando como indicadores el nuacutemero de unidades de vegetacioacuten producidas por divisioacuten de los mismos la superficie media de las teselas resultantes y su coeficiente de forma (relacioacuten periacutemetroaacuterea) Dicho estudio identifi-caba posibles puntos de conflicto que deberiacutean haber servido para orientar las fases siguientes de planificacioacuten y proyecto de las infraestructu-ras Al mismo nivel jeraacuterquico se situaraacute en bre-ve el Plan Estrateacutegico del Patrimonio Natural y

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En los taludes de carretera no solo prosperan especies frecuentes yo de amplia distribucioacuten En la imagen aparece un lirio boca de serpiente (Iris xyphium) y a su derecha un fragmento de la inflorescencia de una arzolla (Thapsia villo-sa) La fotografiacutea estaacute tomada en la parte supe-rior de un desmonte de la carretera M-604 de Madrid En los documentos de trabajo para la actualizacioacuten de Cataacutelogo Regional de Especies Amenazadas de la Flora Silvestre de la Comuni-dad de Madrid se propone su proteccioacuten como especie lsquosensible a la alteracioacuten de su haacutebitatrsquo (Blanco et al 1999) ya que se trata de una es-pecie escasa y de distribucioacuten puntual en este aacutembito territorial Autor Ignacio Mola

Blanco de Castro E (Coor) 1999 Revisioacuten del Cataacutelogo Regional de Especies Amenazadas de la Flora Silvestre de la Comunidad de Madrid Informe ineacutedito incluido en el Plan Forestal de la Comunidad de Madrid

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la Biodiversidad que ademaacutes de ser ob jeto de evaluacioacuten ambiental seguacuten lo dispuesto en la Ley 92006 (BOE nordm 102 del 29 de abril de 2006) sobre evaluacioacuten de los efectos de determinados planes y programas en el medio ambiente se ha sometido a consultas e informacioacuten puacuteblica de acuerdo con el procedimiento de elaboracioacuten del Plan Estrateacutegico que la Ley 422007 (BOE nordm 299 de 14 diciembre 2007) del Patrimonio Natural y de la Biodiversidad regula en su segundo capiacute-tulo El Plan Estrateacutegico del Patrimonio Natural y la Biodiversidad estaacute llamado a convertirse en el principal instrumento para la planificacioacuten de la accioacuten de la Administracioacuten General del Esta-do en la materia y tiene por objeto promover la conservacioacuten el uso sostenible y en su caso la restauracioacuten del patrimonio los recursos natu-rales terrestres y marinos y de la biodiversidad y geodiversidad Entre los principios que inspi-ran el Plan Estrateacutegico resulta obligado mencio-nar la necesaria integracioacuten sectorial es decir la incorporacioacuten de los objetivos y metas para la biodiversidad como parte esencial de todas las poliacuteticas sectoriales nacionales autonoacutemicas y lo-cales en particular aquellas que rigen la gestioacuten del territorio y los recursos naturales entre las que indudablemente destacan las de transporte

A nivel de programas parece oportuno introducir una referencia al Programa Marco Ambiental 2000-2006 que pretendiacutea establecer una Red de Corre-dores Ecoloacutegicos en la Comunidad Autoacutenoma de Euskadi destacable por su innovacioacuten y coheren-cia territorial Los objetivos fundamentales de este programa eran identificar las aacutereas prioritarias para la conexioacuten e integracioacuten territorial de los espa-cios naturales protegidos (corredores ecoloacutegicos) garantizar un grado de conectividad ecoloacutegica entre estos y en el conjunto del territorio establecer las pautas de gestioacuten para la conservacioacuten y mejora de la conectividad ecoloacutegica y finalmente establecer un punto de partida para la integracioacuten de los cri-terios de conectividad en la ordenacioacuten territorial Este programa ha tenido continuidad en el Progra-ma Marco Ambiental de la Comunidad Autoacutenoma de Euskadi 2007-2010 que entre sus liacuteneas principa-les de actuacioacuten incluye el avance en el desarrollo de la red de corredores ecoloacutegicos

En el aacutembito legislativo la anteriormente mencio-nada Ley 422007 del Patrimonio Natural y de la Biodiversidad (BOE nordm 299 de 14 diciembre 2007) define el papel de la conectividad en la conser-vacioacuten de la biodiversidad Las Administraciones Puacuteblicas preveraacuten en su planificacioacuten ambiental

[hellip] mecanismos para lograr la conectividad ecoloacute-gica del territorio estableciendo o restableciendo corredores [hellip] Para ello se otorgaraacute un papel prio-ritario a los cursos fluviales las viacuteas pecuarias las aacutereas de montantildea y otros elementos del territorio lineales y continuos [hellip] con independencia de que tengan la condicioacuten de espacios naturales prote-gidos Circunstancias que ponen de manifiesto la importancia de la restauracioacuten ecoloacutegica de las infraestructuras de transporte y su entorno inme-diato como elementos lineales y continuos Infra-estructuras que a la vez que vertebran el territo-rio causan importantes impactos ambientales en-tre los que destaca la destruccioacuten y fragmentacioacuten de haacutebitats La mitigacioacuten de estos efectos adver-sos es la base del disentildeo de numerosas medidas correctoras de impacto ambiental como las que se han planteado en los capiacutetulos precedentes de este libro

Despueacutes de este breve repaso a planes progra-mas y la referencia obligada a la Ley 422007 del Patrimonio Natural y de la Biodiversidad conviene retornar la escala de proyecto donde debe hacerse una mencioacuten expresa a la serie de documentos para la reduccioacuten de la fragmentacioacuten de haacutebitats cau-sada por infraestructuras de transporte (MMA 2006 MARM 2008 y MARM 2010) coordinado por la Di-reccioacuten General de Medio Natural y Poliacutetica Forestal (antes DG para la Biodiversidad) del Ministerio de Medio Ambiente y Medio Rural y Marino Aunque estos documentos no constituyen un texto legal su utilidad en las distintas fases del ciclo de vida de las infraestructuras se ha sentildealado en el Capiacute-tulo 8 del presente libro Por otro lado cada vez resulta maacutes habitual encontrar la referencia a dicha serie de documentos en el condicionado de las de-claraciones de impacto ambiental obligando asiacute a los proyectistas a tenerlos en cuenta En su nuacuteme-ro maacutes reciente el tercer libro de la serie aborda las fases de planificacioacuten y trazado de carreteras y ferrocarriles por su importancia para aplicar los principios de precaucioacuten y prevencioacuten identifica-dos como momentos clave para reducir los efectos de la fragmentacioacuten de los haacutebitats Desde la cita-da Direccioacuten General se siguen preparando nuevos documentos ordenando y recopilando los cono-cimientos sobre la materia en el momento actual que sirven de orientacioacuten a los teacutecnicos implicados en las distintas fases de redaccioacuten de proyectos Ademaacutes de experiencias reales se recopila infor-macioacuten sobre la utilidad de accesibles herramientas informaacuteticas (Conefor Sensinode Corredor Design Fragstats Alcor etc) que mediante el uso de siste-mas de informacioacuten geograacutefica permiten evaluar los

efectos de las infraestructuras sobre aspectos tales como la conectividad o definir corredores ecoloacutegi-cos analizar la idoneidad del haacutebitat etc

La consideracioacuten de la biodiversidad como variable ambiental abarca muchos maacutes aspectos que exce-den a un proyecto de infraestructuras que por lo general solo pueden ser atendidos en casos ex-cepcionales pero aun asiacute hay algunas cuestio-nes baacutesicas que resultan alarmante desatendidas como por ejemplo las medidas que figuran en el RD 2892003 (BOE nordm 58 de 8 de marzo de 2003) referidas a los materiales forestales de reproduc-cioacuten Si bien en los pliegos de prescripciones teacutecni-cas particulares de los proyectos es frecuente que se incluya una serie de requisitos a cumplir por las plantas y semillas a emplear en las labores de res-tauracioacuten en general referidas a su presentacioacuten aspecto ausencia de heridas etc no es frecuente que se repare en sus caracteriacutesticas fenotiacutepicas y geneacuteticas aunque esto uacuteltimo puede tener profun-das implicaciones en el eacutexito de los proyectos de restauracioacuten y sobre todo en coacutemo estos influyen en los ecosistemas aledantildeos (veacutease Capiacutetulo 6) El caso es que este material ya sea en forma de plan-tas o partes de las mismas cuando se destinan a fines distintos de la selvicultura basta con que porten una etiqueta o documento en el que figure la indicacioacuten lsquono destinado a usos forestalesrsquo para evitar que le sea de aplicacioacuten la citada normativa

4 Incendios forestales

Una buena parte de las formaciones vegetales medi-terraacuteneas deben su configuracioacuten al papel del fuego

(Pausas y Verduacute 2005 2008 Verduacute y Pausas 2007) sin embargo su recurrencia y el origen antroacutepico de la mayoriacutea de ellas obliga a distintas administracio-nes a que se establezcan medidas que condicionan sine die y en el espacio el manejo de la vegetacioacuten en el entorno de las carreteras Las comunidades autoacutenomas tienen transferidas desde la deacutecada de los ochenta las competencias de los planes de pre-vencioacuten y extincioacuten de incendios mientras que las Administracioacuten General del Estado conserva las labo-res de refuerzo de medios seguacuten la Ley 432003 de Montes (BOE nordm 280 de 22 de noviembre de 2003) y su posterior modificacioacuten por la Ley 102006 (BOE nordm 102 de 29 de abril de 2006) Ademaacutes la preven-cioacuten y seguridad en materia de incendios son muy heterogeacuteneas desde el punto de vista competencial en el sentido de que se insertan de forma transver-sal en mayor o menor medida en varios aacutembitos proteccioacuten civil medio ambiente urbanismo indus-tria etc

A modo de ejemplo el Decreto 1301998 (DOGC nordm 2656 de 9 de junio de 1998) de prevencioacuten de incendios forestales en las aacutereas de influencia de las carreteras en Cataluntildea en cuyo preaacutembulo se identifica a las viacuteas de comunicacioacuten proacuteximas a zonas forestales como uno de los lugares de ini-cio de muchos incendios forestales Con motivo de la prevencioacuten para la defensa contra los incendios forestales nos encontramos con una normativa especiacutefica que desarrolla el tratamiento de la ve-getacioacuten en las aacutereas colindantes con las viacuteas de comunicacioacuten para reducir la posibilidad de inicio de fuegos desde estas zonas para lo que se propo-ne reducir la carga de combustible Entendieacutendose por aacutereas de influencia una franja de 500 m que rodea las carreteras las autoviacuteas y las autopistas

Figura 10 Mapa de las regiones de procedencia de pino carrasco (Pinus halepensis) Modificado de BOE 2009

Figura 9 Ejemplo de utilizacioacuten de Conefor Sensinode para determinar la importancia para la conectividad de los haacutebitats con presencia de urogallo (Tetrao urogallus) en Leacuterida Corte-siacutea de Santiago Saura (Pascual y Saura 2008)

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de Cataluntildea sea cual sea su titularidad que trans-curran por terrenos que son forestales incluidos en los teacuterminos municipales declarados de alto riesgo de incendio forestal por el Decreto 641995 (DOGC nordm 2022 de 10 de marzo de 1995) si bien la norma tambieacuten diferencia los trabajos a realizar seguacuten la importancia de la viacutea de comunicacioacuten y el aacuterea que atraviese La citada normativa marca dos tipos de actuaciones a realizar alrededor de

las carreteras disminucioacuten de la carga de combus-tible y acciones sobre la vegetacioacuten maacutes piroacutefila Los organismos responsables de las carreteras o las empresas concesionarias de viacuteas o de elemen-tos funcionales de la carretera quedan obligados a mantener unas zonas de seguridad y de proteccioacuten en las condiciones determinadas en este Decreto en los terrenos que sean de dominio puacuteblico o pro-piedad de la Administracioacuten

Cuadro 3 A los efectos del Decreto 1301998 de la Generalitat de Catalunya se entiende por

a) Zona de seguridad

Franja de terreno libre de vegetacioacuten arbustiva herbaacutecea seca y de restos vegetales muertos En cuanto a la vegetacioacuten arboacuterea no podraacute suponer la continuidad entre las copas de ambos lados de la viacutea como tampoco la de la masa forestal colindante a cada lado La zona de seguridad se define de 1 m de anchura a partir del extremo exterior de la calzada En el caso de existir arcenes pavimentados la zona de seguridad de 1 m seraacute considerada a partir de la arista del pavimento La anchura de la zona de seguridad podraacute ser ampliada excepcionalmente en aquellos tramos de maacuteximo riesgo de incendios forestales la cual deberaacute ser especificada y justificada por la Direccioacuten General del Medio Natural previo informe del organismo responsable de la viacutea Esta anchura deberaacute definirse antes del 31 de diciembre de cada antildeo para poder incorporarla a las previsiones de conservacioacuten

b) Zona de proteccioacuten

Franja de una anchura miacutenima de 3 m en autoviacuteas y autopistas (anchura miacutenima de 2 m en el resto de carreteras) formada por una masa arbolada yo arbustiva clareada que evite la continuidad vertical y horizontal entre los estratos arbustivo y arboacutereo El recubrimiento de la masa arboacuterea deberaacute ser inferior al 75 del total En todos los casos esta distancia se contaraacute a partir de la liacutenea externa de la zona de seguridad definida anteriormente

Llegados a este punto conviene introducir algu-na duda sobre el papel de las infraestructuras de transporte en el origen de los incendios foresta-les diferenciando a su vez entre carreteras e in-fraestructuras ferroviarias Mientras que el traacuten-sito de trenes sobre las viacuteas de ferrocarril puede originar chispas que son causa documentada de numerosos incendios en el entorno de las liacuteneas del tren el papel de las carreteras como causa accidental de incendios puede resultar maacutes discu-tible Cabe recordar que el hecho de arrojar coli-llas desde la ventanilla de un vehiacuteculo es un acto punible achacable al comportamiento inciacutevico de

un usuario que ademaacutes se sanciona por la legisla-cioacuten vigente y debe perseguirse antes que limitar el desarrollo de la vegetacioacuten que rodea a las viacuteas donde se den estos comportamientos irrespon-sables Por otro lado algunas instituciones por ejemplo WWFAdena (2006) hace tiempo que ad-vierten sobre la necesidad de revisar la actual cla-sificacioacuten de causas de incendios forestales para reflejar mejor la realidad del problema De hecho Aacutelamo (2007) cita a los incendios forestales como ejemplo evidente donde la prevencioacuten no deberiacutea descuidar las causas y motivaciones de no pocos incendios provocados

Figura 11 En la imagen de la izquierda Monfraguumle (Caacuteceres) el estado de conservacioacuten de algunas sentildeales que no estaacuten directamente relacionadas con la seguridad vial puede denotar cierto desintereacutes sobre los aspectos ambientales (Foto Carlos Iglesias) En la imagen de la derecha rodal de vegetacioacuten arboacuterea aloacutectona (Pinus sp) afectado por un incendio en una margen de la autopista Reacutegis Bittancourt (Brasil) pese a que esta zona es de clima muy huacutemedo y con una vegetacioacuten potencial correspondiente a lsquoMata Atlaacutenticarsquo con muy escasos incendios (Foto Ignacio Mola)

Un caso similar de aplicacioacuten de actuaciones preven-tivas en el entorno de las carreteras es por ejemplo el que se recoge en un anuncio de licitacioacuten puacutebli-ca de la Direccioacuten General de Carreteras del Estado para la redaccioacuten del proyecto de desbroce y tala de aacuterboles en zona de dominio puacuteblico y taludes en toda la red de carreteras del Estado en la provin-cia de Lugo (BOE nordm 104 de 30 de abril de 2008) en cumplimiento de la Ley de prevencioacuten y defensa contra los incendios forestales de Galicia (DOG nordm 74 de 9 de abril de 2007) El artiacuteculo 21 de esta Ley establece la obligatoriedad de gestionar la biomasa vegetal en los terrenos incluidos en la zona de domi-nio puacuteblico de la red de autopistas autoviacuteas y viacuteas raacutepidas y carreteras

En todo caso las citadas comunidades autoacutenomas no son las uacutenicas donde se establecen zonas de influencia forestal de varios centenares de metros ni donde se obliga a los titulares de las infraes-tructuras de transporte a actuar sobre la vegetacioacuten de su entorno Por ejemplo en el caso de Andalu-ciacutea cuya Ley 51999 de prevencioacuten y lucha contra los incendios forestales (BOJA nordm 82 16 de julio de 1999) apenas incluiacutea una breve mencioacuten a las viacuteas de comunicacioacuten ha aprovechado su Reglamento de desarrollo para incorporar la obligacioacuten de mantener libres de residuos matorral y vegetacioacuten herbaacutecea durante las eacutepocas de peligro medio y alto (es decir desde el 1 de mayo hasta el 31 de octubre) tanto la zona de dominio puacuteblico como la de servidumbre de las carreteras viacuteas feacuterreas y otras viacuteas de co-municacioacuten Si bien antildeade que podriacutean mantenerse formaciones arboacutereas y arbustivas en las densidades que en su caso se establezcan

El coste de las anteriores medidas de prevencioacuten queda reflejado en el Plan de Autoproteccioacuten 2008-2010 de ADIF que ha supuesto una inversioacuten de maacutes de 900000 euros en la Comunidad Foral de Navarra en la prevencioacuten de incendios proacuteximos a los 199 km de red convencional en esta comunidad Este Plan incluye labores desbroce del estrato her-baacuteceo en una franja de 8 m a cada lado de la viacutea desbroce del matorral poda hasta 5 m de altura en los ejemplares arboacutereos y eliminacioacuten de los restos procedentes de desbroce y corta ademaacutes de riegos con herbicida sobre la plataforma ferroviaria mediante trenes herbicidas formados por vagones laboratorio de preparados quiacutemicos de almace-namiento de productos herbicidas y de almacena-miento de envases vaciacuteos y residuos (ABC 2010)

Figura 12 Siega parcial del talud de una autoviacutea conservando parte del estrato herbaacuteceo y un ejemplar arboacutereo sin podar (Foto Javier Martiacutenez de Castilla FERROVIAL-AGROMAacuteN)

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IacuteNDICE

Retomando el grado de influencia que las normas de prevencioacuten de incendios forestales pueden tener a la hora de disentildear la restauracioacuten de las infraestructuras de transporte el Decreto 1301998 de la Generalitat de Catalunya preveacute que se incluyan como factores a tener en cuenta en la EIA de las nuevas infraestructu-ras mapas de combustibilidad continuidad de la masa forestal grados de inflamabilidad de la vegetacioacuten y anaacutelisis de los incendios producidos en las zonas que atraviesa la nueva viacutea de comunicacioacuten Por otro lado para la restauracioacuten de taludes se obliga a seleccionar especies de baja inflamabilidad que dificulten el ini-cio y la propagacioacuten del fuego (condicioacuten que no es extrantildeo encontrar en las declaraciones de impacto am-biental de infraestructuras localizadas tambieacuten en otras regiones) Algunos criterios que se establecen por De-creto para la seleccioacuten de especies son los siguientes

a) Evitar las especies que contengan aceites esen-ciales y otros compuestos orgaacutenicos volaacutetiles y altamente inflamables

b) Priorizar las especies que mantienen las hojas verdes y un alto contenido hiacutedrico en los tejidos durante el verano las que presentan una menor relacioacuten superficievolumen (plantas de estructura compacta) y las que generan pocos restos finos

c) Favorecer las especies cuyas hojas y los restos se descomponen con maacutes rapidez

d) Favorecer las especies de madera densa y alta capacidad caloacuterica que necesitan absorber una gran cantidad de calor antes de encenderse

Finalmente en el aacutembito de Cataluntildea cabe destacar la obligacioacuten de la Direccioacuten General del Medio Natural de elaborar un informe anual con relacioacuten a los incendios originados en las zonas de seguridad y de proteccioacuten de las carreteras de forma que se pueda tener un co-nocimiento preciso de los tramos de carretera donde se han producido estos incendios y de sus causas que deberaacute poner en conocimiento de los organismos res-ponsables y de las entidades municipales

5 Sanidad vegetal

Otro aspecto de importancia a la hora de seleccionar especies y durante las posteriores labores de manteni-miento tiene que ver con la materia fitosanitaria pues-to que los planes de lucha y prevencioacuten contra deter-minadas plagas y enfermedades de algunas especies vegetales pueden repercutir sobremanera en las espe-cies implantadas en taludes y otras zonas restauradas

de las infraestructuras de transporte El ejemplo por antonomasia en esta materia lo trae la enfermedad del fuego bacteriano una grave enfermedad de los vege-tales causada por la bacteria Erwinia amylovora La pri-mera referencia legal sobre el fuego bacteriano es el RD 12011999 (BOE nordm 184 de 3 de agosto de 1999) por el que se establece el programa nacional de erra-dicacioacuten y control del fuego bacteriano de las rosaacuteceas (modificado posteriormente por el RD 15122005 y maacutes recientemente por el RD 2462010) Espantildea estaacute con-siderada en el aacutembito territorial de la Unioacuten Europea como lsquozona protegidarsquo frente a la bacteria que causa la enfermedad de manera que no se considera esta-blecida en el territorio nacional Aunque es frecuente la deteccioacuten de focos en distintos aacutembitos de nuestra geografiacutea el RD 2462010 (BOE nordm 73 de 29 de marzo de 2010) ha suprimido el Anexo I del RD 12011999 donde se declaraban la provincia de Guipuacutezcoa y el centro y norte de Navarra como zonas donde la enfer-medad siacute se consideraba establecida Esta enfermedad afecta fundamentalmente a plantas de la familia de las rosaacuteceas ocasionando importantes peacuterdidas econoacutemi-cas por dantildeos directos en explotaciones de frutales de pepita en general y de manzano y peral en particular asiacute como en el sector de plantas ornamentales pertene-cientes a dicha familia El programa y sus medidas son de aplicacioacuten en todo el territorio nacional excepto en las zonas no protegidas que se determinen para las cuales seriacutean de aplicacioacuten las disposiciones estableci-das en su artiacuteculo 9 Ademaacutes conviene resaltar que las medidas adoptadas se declaran de utilidad puacuteblica de acuerdo con la Ley 432002 de sanidad vegetal (BOE nordm 279 de 21 de noviembre de 2002)

Entre las medidas preventivas se preveacute la realizacioacuten de estudios sistemaacuteticos por parte de las comunida-des autoacutenomas Si como consecuencia del resultado de las prospecciones o de la comunicacioacuten a la que quedan obligados particulares y entes puacuteblicos en el artiacuteculo 3 se confirmara la presencia de un foco inicial de fuego bacteriano ademaacutes de tenerse que declarar contaminada la zona de afeccioacuten la comu-nidad autoacutenoma estableceraacute una zona de seguridad alrededor del foco detectado que quedaraacute delimitada en funcioacuten de los conocimientos sobre la epidemiolo-giacutea de la enfermedad y de los meacutetodos de profilaxis especiacuteficos pero que en principio cubriraacute una exten-sioacuten miacutenima de un aacuterea circular de 1 km de radio Entre las medidas a adoptar en esa zona de seguridad se encuentra la prohibicioacuten de plantacioacuten o replanta-cioacuten de vegetales hospedantes a la enfermedad sin la expresa autorizacioacuten de la comunidad autoacutenoma mientras se mantenga vigente la zona de seguridad Entre los requisitos especiales para la introduccioacuten y desplazamiento de vegetales y productos vegetales

hospedantes de Erwinia amylovora en y por una zona protegida contra dicho organismo nocivo es precep-tivo el pasaporte fitosanitario de acompantildeamiento (modalidad zona protegida) tanto para el material originario de la zona protegida como para el intro-ducido desde una zona no protegida La enfermedad del fuego bacteriano genera repetitivos episodios de alarma en aacutembitos reducidos que finalmente se traducen a nivel autonoacutemico en una mayor presioacuten normativa sobre el empleo ornamental de algunas es-pecies vegetales de lo que en un principio se deduce de las medidas preventivas de la Legislacioacuten baacutesica Por todo ello seguacuten las circunstancias no resulta ex-trantildeo encontrar recomendaciones en algunos planes autonoacutemicos para que las consejeriacuteas competentes adopten medidas encaminadas a retirar determinadas especies ornamentales de los maacutergenes de las carre-teras de su titularidad

En este sentido en el aacutembito de La Rioja el De-creto 1052003 (BOR nordm 112 de 9 de septiembre de 2003) prohibiacutea por un periacuteodo de 5 antildeos la plan-tacioacuten de ornamentales hospedantes de los geacuteneros Chaenomeles Crataegus Eriobotrya Malus Mespilus Photinia Pyracantha Pyrus Sorbus y Stranvaesia en aceras medianas y zonas ajardinadas de carreteras autoviacuteas y jardines puacuteblicos de toda la Comunidad Autoacutenoma de La Rioja en el marco de la lucha contra el fuego bacteriano Posteriormente la Orden 112009 de la Consejeriacutea de Agricultura Ganaderiacutea y Desarro-llo Rural (BOR nordm 27 de 27 de febrero de 2009) ha extendido a las viacuteas o jardines puacuteblicos o privados la prohibicioacuten de plantar algunas especies ornamentales en el mencionado marco de la lucha contra el fuego bacteriano dentro del territorio de La Rioja En defi-nitiva el proyectista se encuentra una vez maacutes con restricciones legales para la seleccioacuten de especies y aunque quizaacutes no fueran las maacutes habituales para res-tauraciones en tramos interurbanos no debe omitirse el hecho de que la coincidencia de varias normas en este sentido puede originar situaciones contradicto-rias con las restauraciones propuestas durante la tra-mitacioacuten ambiental de este tipo de proyectos

6 Trasplantes

Una tendencia de especial importancia por su cues-tionable eficacia y el consumo de recursos econoacute-micos que representa cuando no responde a la sin-gularidad de alguacuten ejemplar que lo justifique es el trasplante indiscriminado de aacuterboles con motivo de la construccioacuten de una infraestructura de transporte No son extrantildeas las situaciones en las que debido al exceso de celo en la interpretacioacuten de una DIA el

criterio predominante de una supervisioacuten anoacutenima o sencillamente con motivo del nombre con que se designe una autoviacutea los redactores de proyectos se ven obligados a incluir el trasplante indiscriminado de pies arboacutereos a veces de especies o ejemplares de dudoso intereacutes El trasplante de arbolado cons-tituye una de las labores de arboricultura de mayor cuantiacutea econoacutemica y a fecha de hoy es difiacutecil su in-tegracioacuten en los tiempos reales de la obra civil Pese a ello no son pocas las recomendaciones por medio de instrucciones guiacuteas o incluso normativa oficial en las que se contempla el trasplante de arbolado como medida de aplicacioacuten general a incorporar en proyectos de infraestructuras de transporte

Figura 13 Trasplante de un cedro de grandes dimensiones en un entorno urbano

Aunque son escasos los informes en los que se ofrezcan datos del seguimiento de esta medida en el aacutembito de las infraestructuras de transporte los que logran alguna difusioacuten como Mendiburu y Septieacuten (2007) y Velasco et al (2008) parecen evidenciar que se trata de uno de los maacutes claros ejemplos de afec-cioacuten que deberiacutea motivar una modificacioacuten de traza-do en fase de estudio informativo si es que la exis-tencia de alguacuten aacuterbol o arboleda singular mereciese tal consideracioacuten antes que contemplar trasplantes indiscriminados en fase de proyecto de construccioacuten

La construccioacuten de infraestructuras de transporte implica ocupar parte del territorio atravesado e inevitablemente afecta de forma directa a la ve-getacioacuten que pudiera existir Si las afecciones pre-vistas no fueran asumibles el procedimiento de EIA no deberiacutea resolverse con una DIA positiva a cambio de proponer la realizacioacuten del trasplan-te masivo de los aacuterboles afectados Entre otros

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IacuteNDICE

motivos porque si no hay correspondencia entre el coste de una medida correctora y su probabi-lidad de eacutexito se dantildea directamente a la credibi-lidad del propio procedimiento y de las medidas de restauracioacuten En otras ocasiones se propone su compensacioacuten mediante la plantacioacuten de nuevas unidades de vegetacioacuten que sustituyan a los pies afectados por la obra En todo caso se constata una tendencia creciente que obliga a incorporar en los proyectos este tipo de medidas Probable-mente sean recomendaciones inspiradas en algu-nos casos en la existencia de normas referidas a la proteccioacuten del arbolado urbano como por ejemplo la Ley 82005 de 26 de diciembre de Proteccioacuten y Fomento del Arbolado Urbano de la Comunidad de Madrid (BOCM nordm 312 de 31 de di-ciembre de 2005) Esta Ley prohiacutebe la tala de todos los ejemplares arboacutereos de cualquier especie con maacutes de 10 antildeos de antiguumledad o 20 cm de diaacuteme-tro de tronco al nivel del suelo que se ubiquen en

suelo urbano y se vean afectados por obras de reparacioacuten o reforma de cualquier clase o por la construccioacuten de infraestructuras debieacutendose pro-ceder a su trasplante Aunque si por razones teacutec-nicas dicho trasplante no fuera posible se podriacutea autorizar la tala del ejemplar afectado mediante decreto del alcalde singularizado para cada ejem-plar previo expediente en el que se acredite la inviabilidad de cualquier otra alternativa Ademaacutes en aquellos casos en los que la tala sea la uacutenica alternativa viable se exigiraacute en la forma en que se establezca la plantacioacuten de un ejemplar adulto de la misma especie por cada antildeo de edad del aacuterbol eliminado Es importante tener en cuenta el papel y las caracteriacutesticas de manejo de la vege-tacioacuten arboacuterea en diferentes medios debieacutendose reflexionar sobre la extrapolacioacuten de estas normas o recomendaciones concebidas para las zonas verdes del medio urbano al caso de las infraes-tructuras de transporte en el medio natural

IV CONCLUSIONES

Algunas normas sectoriales como el Reglamen-to General de Carreteras (RD 18121994) con-templan la necesidad de revisar perioacutedicamente para su actualizacioacuten permanente las normas e instrucciones teacutecnicas a las que deban sujetarse los trabajos y obras de construccioacuten de estas in-fraestructuras Este libro en su conjunto podriacutea funcionar como revulsivo para esta renovacioacuten pues se identifican problemas teacutecnicos vaciacuteos y contradicciones legales y se aportan bases cien-tiacuteficas en el aacutembito de la restauracioacuten ecoloacutegica de estas infraestructuras

La confeccioacuten de instrucciones de caraacutecter ambien-tal y de obligado cumplimiento en la fase de re-daccioacuten de proyectos actualizadas perioacutedicamen-te permite incorporar criterios baacutesicos adecuados a la realidad de los proyectos de infraestructuras de transporte En el sector ferroviario por ejem-plo la redaccioacuten de los proyectos de liacuteneas de alta velocidad se rige por las IGP de ADIF (y el equiva-lente manual para la redaccioacuten de proyectos de la DG de Infraestructuras Ferroviarias del Ministerio de Fomento) cuyo Capiacutetulo 6 estaacute reservado al Medio Ambiente

La aplicacioacuten estricta de algunas normas am-bientales crea un escenario muy complejo para el disentildeo de restauraciones viables que requiere ser debatido en profundidad Por ejemplo no se pueden seleccionar especies sin aceites o resinas y con contenidos hiacutedricos elevados durante el ve-rano simplemente por las caracteriacutesticas ecofisio-loacutegicas de la mayor parte de especies presentes en la Peniacutensula Por otro lado los protocolos de prevencioacuten contra incendios arruinan los trabajos de restauracioacuten poco tiempo despueacutes de su rea-lizacioacuten

Una evidencia en liacutenea con el capiacutetulo precedente sobre las implicaciones de las autorizaciones am-bientales en relacioacuten con la redaccioacuten de los pro-yectos es que entre el condicionado de la DIA y el contenido del proyecto existe una desvinculacioacuten del oacutergano ambiental que termina devaluando el objeto o la interpretacioacuten de los condicionados de muchas declaraciones Hay que tener en cuen-ta que la DIA es la verdadera desencadenante de todo lo relacionado con la restauracioacuten de infra-estructuras de transporte que estamos hablando sobre restauracioacuten ecoloacutegica

V BIBLIOGRAFIacuteA

ABC 2010 httpwwwabcesagenciasnoticiaaspnoticia=573662

Aacutelamo C del y A Saacutenchez Gascoacuten 2007 Los Incen-dios Forestales en la Comunidad de Madrid Causas efectos prevencioacuten sancioacutenhellip Fundacioacuten para la In-vestigacioacuten y el Desarrollo Ambiental (FIDA) y Conse-jeriacutea de Medio Ambiente y Ordenacioacuten del Territorio Comunidad de Madrid

BOC 2004 Decreto 612004 de 17 de junio so-bre carreteras de especial proteccioacuten por atravesar Espacios Naturales Protegidos de Cantabria Con-sejo de Gobierno Boletiacuten Oficial de Cantabria nordm 123 del jueves 24 de junio de 2004 6758-6761 httpboccantabriaesbocesverAnuncioActiondoidAnuBlob=67851

BOCM 1991 Ley 31991 de 7 de marzo de carrete-ras de la Comunidad de Madrid Boletiacuten Oficial de la Comunidad de Madrid de 21 de marzo de 1991

BOCM 2005 Ley 82005 de 26 de diciembre de Proteccioacuten y Fomento del Arbolado Urbano de la Comunidad de Madrid Presidencia de la Comuni-dad Boletiacuten Oficial de la Comunidad de Madrid nordm 312 del saacutebado 31 de diciembre de 2005 6-9 httpwwwmadridorgcsSatelliteblobcol=urldataampblobheader=application2Fpdfampblobheadername1=Content-Dispositionampblobheadervalue1=filename3DCM_LEY_8_2005pdfampblobkey=idampblobtable=MungoBlobsampblobwhere=1220580595573ampssbinary=true

BOE 1963 Orden Ministerial de 21 de marzo de 1963 por la que se aprueba la Instruccioacuten de la Direccioacuten General de Carreteras 71 IC sobre lsquoPlan-taciones en las zonas de servidumbre de las carrete-rasrsquo Ministerio de Obras Puacuteblicas Boletiacuten Oficial del Estado nordm 84 del lunes 8 de abril de 1963 5908-5909 httpwwwcetopesassetsNormativaProfesplantacionesO-21-03-63Plantacionespdf

BOE 1986 Real Decreto Legislativo 13021986 de 28 de junio de evaluacioacuten de impacto ambiental Boletiacuten Oficial del Estado nordm 155 del lunes 30 de ju-nio de 1986 23733-23735 httpwwwboeesboedias19860630pdfsA23733-23735pdf

BOE 1988 Real Decreto 11311988 de 30 de sep-tiembre por el que se aprueba el Reglamento para la ejecucioacuten de Real Decreto Legislativo 13021986

de 28 de junio de Evaluacioacuten de Impacto Ambiental Boletiacuten Oficial del Estado nordm 239 del mieacutercoles 5 de octubre de 1988 28911-28916 httpwwwboeesboedias19881005pdfsA28911-28916pdf

BOE 1988 Ley 251988 de 29 de julio de Carrete-ras Jefatura del Estado Boletiacuten Oficial del Estado nordm 182 del saacutebado 30 de julio de 1988 23514-23524 httpwwwboeesboedias19880730pdfsA23514-23524pdf

BOE 1990 Ley 51990 de 24 de mayo de Carreteras de la Comunidad Autoacutenoma de las Islas Baleares BOE nordm 184 del jueves 2 de agosto de 1990 22613-22619 httpwwwboeesboedias19900802pdfsA22613-22619pdf

BOE 1994 Real Decreto 18121994 de 2 de septiem-bre por el que se aprueba el Reglamento General de Carreteras Ministerio de Obras Puacuteblicas Trans-portes y Medio Ambiente Boletiacuten Oficial del Esta-do nordm 228 de 23 de septiembre de 1994 29237-29262 httpwwwboeesboedias19940923pdfsA29237-29262pdf

BOE 1997 la Ley 51996 de 17 de diciembre de Ca-rreteras de Cantabria Comunidad Autoacutenoma de Can-tabria Boletiacuten Oficial del Estado nordm 51 del viernes 28 de febrero de 1997 6778-6787 httpwwwboeesboedias19970228pdfsA06778-06787pdf

BOE 1999 Real Decreto 12011999 de 9 de ju-lio por el que se establece el programa nacional de erradicacioacuten y control del fuego bacteriano de las rosaacuteceas Ministerio de Agricultura Pesca y Alimentacioacuten Boletiacuten Oficial del Estado nordm 183 del martes 3 de agosto de 1999 28784-28788 httpwwwboeesboedias19990803pdfsA28784-28788pdf

BOE 2002 Ley 432002 de 20 de noviembre de sanidad vegetal Jefatura del Estado Boletiacuten Ofi-cial del Estado nordm 279 del jueves 21 de noviem-bre de 2002 40970-40988 httpwwwboeesboedias20021121pdfsA40970-40988pdf

BOE 2003 Real Decreto 2892003 de 7 de mar-zo sobre comercializacioacuten de los materiales fores-tales de reproduccioacuten Ministerio de la Presidencia Boletiacuten Oficial del Estado nordm 58 del saacutebado 8 de marzo de 2003 9262-9299 httpwwwboeesboedias20030308pdfsA09262-09299pdf

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BOE 2003 Ley 332003 del Patrimonio de las Ad-ministraciones Puacuteblicas Boletiacuten Oficial del Estado nordm 264 del martes 4 de noviembre de 2003 38924-38967 httpwwwboeesboedias20031104pdfsA38924-38967pdf

BOE 2003 Ley 432003 de 21 de noviembre de Montes Jefatura del Estado Boletiacuten Oficial del Estado nordm 280 del saacutebado 22 de noviembre de 2003 41422 -41442 httpwwwboeesboedias20031122pdfsA41422-41442pdf

BOE 2004 Real Decreto 23872004 de 30 de di-ciembre por el que se aprueba el Reglamento del Sector Ferroviario Ministerio de Fomento Boletiacuten Oficial del Estado nordm 315 del viernes 31 de diciem-bre de 2004 42719-42763 httpwwwboeesboedias20041231pdfsA42719-42763pdf

BOE 2005 Real Decreto 15122005 de 22 de di-ciembre por el que se modifica el Real Decreto 12011999 de 9 de julio por el que se establece el programa nacional de erradicacioacuten y control del fue-go bacteriano de las rosaacuteceas Ministerio de Agricul-tura Pesca y Alimentacioacuten Boletiacuten Oficial del Estado nordm 312 del viernes 30 de diciembre de 2005 43140 -43141 httpwwwboeesboedias20051230pdfsA43140-43141pdf

BOE 2006 Ley 92006 de 28 de abril sobre evaluacioacuten de los efectos de determinados pla-nes y programas en el medio ambiente Jefatura del Estado Boletiacuten Oficial del Estado nordm 102 del saacutebado 29 de abril de 2006 16820-16830 httpwwwboeesboedias20060429pdfsA16820-16830pdf

BOE 2006 Ley 102006 de 28 de abril por la que se modifica la Ley 432003 de 21 de noviembre de Montes Jefatura del Estado Boletiacuten Oficial del Esta-do nordm 102 del saacutebado 29 de abril de 2006 16830-16839 httpwwwboeesboedias20060429pdfsA16830-16839pdf

BOE 2007 Ley 262007 de 23 de octubre de Responsabilidad Medioambiental Boletiacuten Ofi-cial del Estado nordm 255 del mieacutercoles 24 octu-bre 200743229-43250 httpwwwboeesboedias20071024pdfsA43229-43250pdf

BOE 2007 Ley 422007 del Patrimonio Natural y de la Biodiversidad Jefatura del Estado Boletiacuten Oficial del Estado nordm 299 del viernes 14 diciem-bre 200751275-51327 httpwwwboeesboedias20071214pdfsA51275-51327pdf

BOE 2008 Real Decreto Legislativo 12008 de 11 de enero por el que se aprueba el texto refundido de la Ley de Evaluacioacuten de Impacto Ambiental de pro-yectos Boletiacuten Oficial del Estado nordm 23 del saacutebado 26 enero 2008 4986-5000 httpwwwboeesboedias20080126pdfsA04986-05000pdf

BOE 2008 Real Decreto 20902008 de 22 de di-ciembre por el que se aprueba el Reglamento de desarrollo parcial de la Ley 262007 de 23 de oc-tubre de Responsabilidad Medioambiental Bole-tiacuten Oficial del Estado nordm 308 del martes 23 de di-ciembre de 2008 51626-51646 httpwwwboeesboedias20081223pdfsA51626-51646pdf

BOE 2009 Resolucioacuten de 28 de julio de 2009 de la Direccioacuten General de Recursos Agriacutecolas y Gana-deros por la que se autoriza y publica el Cataacutelo-go Nacional de las Regiones de Procedencia rela-tiva a diversas especies forestales Boletiacuten Oficial del Estado nordm 224 del mieacutercoles 16 de septiembre de 2009 77628-77660 httpwwwboeesboedias20090916pdfsBOE-A-2009-14709pdf

BOE 2010 Real Decreto 2462010 de 5 de marzo por el que se modifica el Real Decreto 12011999 de 9 de julio por el que se establece el programa nacional de erradicacioacuten y control del fuego bacte-riano de las rosaacuteceas Ministerio de Medio Ambiente y Medio Rural y Marino Boletiacuten Oficial dwel Estado nordm 776 del lunes 29 de marzo de 2010 29347-29349 httpwwwboeesboedias20100329pdfsBOE-A-2010-5103pdf

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BOG 2006 Decreto Foral Normativo 12006 por el que se aprueba el texto refundido de la norma foral de carreteras y caminos de Gipuzkoa Diputacioacuten Fo-ral del Gipuzkoa Boletiacuten Oficial de Gipuzkoa nordm 117 de 21 de junio de 2006 14581-14630 httpwwwgipuzkoanetcastellbog20060621bo060621pdf

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BOJA 2001 Ley 82001 de Carreteras de Andaluciacutea Bo-letiacuten Oficial de la Junta de Andaluciacutea nordm 85 del jueves 26 de julio de 2001 12799-12820 httpwwwjunta-deandaluciaesbojaboletines200185dupdfd1pdf

BOR 2003 Decreto 1052003 de 5 de septiembre por el que se prohiacutebe la plantacioacuten de algunas espe-cies ornamentales en el territorio de la Comunidad Autoacutenoma de La Rioja en el marco de la lucha contra el fuego bacteriano (Erwinia Amylovora) Consejeriacutea de Agricultura y Desarrollo Econoacutemico Boletiacuten Ofi-cial de La Rioja nordm 112 del martes 9 de Septiembre de 2003 4391

BOR 2009 Orden 112009 de 20 de febrero de la Consejeriacutea de Agricultura Ganaderiacutea y Desarrollo Ru-ral por la que se prohiacutebe la plantacioacuten de algunas especies ornamentales en el territorio de la Comuni-dad Autoacutenoma de La Rioja en el marco de la lucha contra el fuego bacteriano (Erwinia amylovora) Con-sejeriacutea de Agricultura Ganaderiacutea y Desarrollo Rural Boletiacuten Oficial de La Rioja nordm 27 del viernes 27 de febrero de 2009 2545

BORM 2008 Ley 22008 de 21 de abril de Car-reteras de la Comunidad Autoacutenoma de la Regioacuten de Murcia Boletiacuten Oficial de la Regioacuten de Murcia nordm 111 del mieacutercoles 14 de mayo de 2008 15085-15108 httpwwwcroemeswebcroemwebambientensfca9fbec891192b50c1256bd7004f727c2d2962c036d7d511c12574490036f4e3$FILELey20carreteras20Murciapdf

Castellana Ribas J y MA Aacutengel Riaza Lujaacuten 2010 Integracioacuten y Restauracioacuten Paisajiacutestica en Estaciones de Esquiacute En Iglesias Merchaacuten C et al 2010 Estu-dios de Paisaje Aacutembitos de Estudio y Aplicaciones Praacutecticas ECOPAacuteS (Ed) Madrid 147 pp httpwwwecopasesDescargas2010_libro_ecopaspdf

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DO 1997 Directiva 9711CE del Consejo de 3 de marzo de 1997 por la que se modifica la Directiva 85337CEE relativa a la evaluacioacuten de las repercusio-nes de determinados proyectos puacuteblicos y privados sobre el medio ambiente DO L 73 de 1431997 p 515 httpeur-lexeuropaeuLexUriServLexUriServdouri=CELEX31997L0011ESHTML

DO 2003 Directiva 200335CE del Parlamento Eu-ropeo y del Consejo de 26 de mayo de 2003 por la que se establecen medidas para la participa-cioacuten del puacuteblico en la elaboracioacuten de determina-dos planes y programas relacionados con el medio ambiente y por la que se modifican en lo que se refiere a la participacioacuten del puacuteblico y el acceso a la justicia las Directivas 85337CEE y 9661CE del Consejo - Declaracioacuten de la Comisioacuten DO L 156 de 2562003 p 1725 httpeur-lexeuropaeuLexUriServLexUriServdouri=OJL200315600170024ESPDF

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DOGC 1998 Decret 1301998 de 12 de maig pel qual srsquoestableixen mesures de prevencioacute drsquoincendis fores-tals en les agraverees Departament drsquoAgricultura Ramade-ria i Pesca Diari Oficial de la Generalitat de Catalunya nordm 2656 de 9 de junio de 1998 7026-7028 httpmediambientgencatnetImagesesp103_2460pdf

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MARM 2008 Prescripciones teacutecnicas para el segui-miento y evaluacioacuten de la efectividad de las medidas correctoras del efecto barrera de las infraestructuras de transporte Documentos para la reduccioacuten de la fragmentacioacuten de haacutebitats causada por infraestruc-turas de transportes nuacutemero 2 OA Parques Nacio-nales Ministerio de Medio Ambiente y Medio Rural y Marino 138 pp Madrid httpwwwmmaespor-talseccionesbiodiversidaddesarrollo_rural_paisajefragmentacion_ruralpdfEfecto__barrera_infraestruc-turas__transportepdf

MARM 2010 Prescripciones teacutecnicas para la reduc-cioacuten de la fragmentacioacuten de haacutebitats en las fases de planificacioacuten y trazado Documentos para la reduccioacuten de la fragmentacioacuten de haacutebitats causa-da por infraestructuras de transportes nuacutemero 3 OA Parques Nacionales Ministerio de Medio Am-biente y Medio Rural y Marino 145 pp Madrid httpwwwmmaesportalseccionesbiodiversidad

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MMA 2006 Prescripciones Teacutecnicas para el disentildeo de pasos de fauna y vallados perimetrales Documen-tos para la reduccioacuten de la fragmentacioacuten de haacutebitats causada por infraestructuras de transporte nordm 1 O A Parques Nacionales Ministerio de Medio Ambiente Madrid 108 pphttpwwwmmaesportalseccionesbiodiversidaddesarrollo_rural_paisajefragmentaci-on_ruralpdfprescripciones_pasos_valladospdf

Pascual L y S Saura 2008 Integracioacuten de la conec-tividad ecoloacutegica de los bosques en los instrumen-tos de planificacioacuten forestal a escala comarcal y re-gional propuesta metodoloacutegica y nueva herramienta de decisioacuten Montes Revista de Aacutembito Forestal 94 31-37 httpwwwrevistamontesnetdescargalibreaspxid=13315

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Pausas JG y M Verduacute 2008 Fire reduces morpho-space occupation in plant communities Ecology 89 2181-2186

Velasco Ortega JA JJ Rosado Loacutepez y M Arroyo Gutieacuterrez 2008 Estudio de condicionantes en la eje-cucioacuten de trasplantes de arbolado adulto en obra Congreso Nacional del Medio Ambiente Cumbre del Desarrollo Sostenible Madrid 1 al 5 de diciembre de 2008 16 pp httpwwwconama9orgconama9downloadfilesCTs2762_JVelascopdf

Verduacute M y JG Pausas 2007 Fire drives phyloge-netic clustering in Mediterranean Basin woody plant communities Journal of Ecology 95 1316-323

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11Restauracioacuten ecoloacutegica e infraestructuras de transporte perspectivas y recomendaciones

Luis Balaguer Fernando Valladares Adriaacuten Escudero Ignacio Mola y Valentiacuten Alfaya

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CAPIacuteTULO 11 Restauracioacuten ecoloacutegica e infraestructuras de transporte perspectivas y recomendaciones

Luis Balaguer Fernando Valladares Adriaacuten Escudero Ignacio Mola y Valentiacuten Alfaya

En el futuro la integracioacuten ambiental de las ca-rreteras y viacuteas feacuterreas seraacute parte del disentildeo de la infraestructura desde el inicio de la redaccioacuten del proyecto constructivo El disentildeo de la infraestructu-ra contemplaraacute los condicionantes ambientales del territorio que atraviesa El trazado de la viacutea se esta-bleceraacute en funcioacuten de la huella energeacutetica y de las emisiones del traacutefico rodado No seraacuten necesarias las medidas correctoras dado que la configuracioacuten final de la viacutea estaraacute integrada en los procesos eco-loacutegicos locales No se hablaraacute de impactos sino de reconfiguracioacuten del entorno Los taludes no seraacuten planos inclinados sino que el plano de la rasante estaraacute circundado por relieves semejantes a los pre-dominantes en el paisaje regional El efecto barrera de la viacutea seraacute utilizado para bloquear flujos no de-seados tanto hiacutedricos o de sedimentos como de organismos Las viacuteas no solo canalizaraacuten el movi-miento de pasajeros y mercanciacuteas sino que tambieacuten habilitaraacuten corredores ecoloacutegicos para la migracioacuten de polinizadores especies vulnerables o para la co-nexioacuten de poblaciones de organismos La carretera y la viacutea del tren seraacuten elementos de intereacutes tambieacuten para la construccioacuten del paisaje desde una pers-pectiva ecoloacutegica La propia construccioacuten de la viacutea seguiraacute un procedimiento diferente Actualmente se redactan proyectos cerrados que son replanteados a partir de la realidad en obra y corregidos mediante los frecuentes modificados En el futuro el proceso constructivo responderaacute a una estrategia adaptati-va en la que el responsable en obra adecuaraacute las propuestas en funcioacuten de la realidad que encuentra a medida que avanza la construccioacuten

Estos avances sucederaacuten y de alguna forma ya es-taacuten sucediendo impulsados por dos factores El pri-mero y el maacutes eficaz de los motores de cambio seraacute una nueva sensibilidad de los agentes sociales Se generaraacute una demanda que vincularaacute la exigencia ambiental con la calidad de vida de los ciudadanos El concepto mismo de calidad de vida evolucionaraacute y si por ejemplo ahora se identifica con calidad de vida la velocidad seguridad y el confort en el traacutensi-to por la viacutea en el futuro estas exigencias pareceraacuten evidentes y triviales y se ambicionaraacute circular a tra-veacutes de un paisaje funcional con valores educativos y patrimoniales El segundo motor seraacute el avance en el conocimiento cientiacutefico-teacutecnico El salto cua-litativo vendraacute de la mano de la incorporacioacuten de la visioacuten desde la ecologiacutea frente a planteamientos anteriores de inspiracioacuten marcadamente agronoacutemi-ca u ornamental con poco contexto bioloacutegico Por ejemplo frente a siembras y plantaciones prescri-tas por recetas de aplicacioacuten universal se optaraacute por soluciones locales que interpreten el relieve del espacio afectado y contemplen los movimientos de los organismos en el entorno de la infraestructura Se emplearaacute maquinaria adaptada a las nuevas exi-gencias capaces de construir superficies rugosas y estables frente a acabados lisos artificiales

Las limitaciones econoacutemicas no supondraacuten un obs-taacuteculo en la medida que se cambiaraacute el modo de realizar el balance En la actualidad los costes de construccioacuten pesan de forma diferencial En el futu-ro las administraciones y empresas concesionarias contemplaraacuten tambieacuten los costes reales y a largo plazo asociados con el mantenimiento de la infra-estructura como es el caso no ya de las siegas de los herbazales en las maacutergenes de la viacutea sino de las penalizaciones por cierre temporal de la infraestruc-tura por problemas teacutecnicos Incluso el cambio en la sensibilidad permitiraacute incorporar costes intangibles relevantes a escalas temporales mayores

Algunos de estos avances comienzan a vislumbrarse La trasposicioacuten de algunas directivas europeas a la normativa estatal invita a perfeccionar la integracioacuten de la infraestructura en su entorno en lugar de per-seguir la depuracioacuten de las medidas correctoras

En la actualidad el proyecto y el proceso cons-tructivo supeditan las cuestiones ambientales a las exigencias teacutecnicas y econoacutemicas Este plan-teamiento resulta en impactos hidroloacutegicos en las comunidades vegetales en la fauna en el paisaje etc que deben ser paliados mediante medidas co-rrectoras que elevan el coste de la obra Hoy por hoy mientras se opera el cambio de paradigma

las medidas preventivas y correctoras e incluso en ocasiones las compensatorias son evidentemen-te necesarias Su disentildeo y ejecucioacuten no obstante pueden revisarse desde una nueva perspectiva con el fin de mejorar su eficacia en teacuterminos de con-secucioacuten de objetivos y eficiencia en cuanto a la relacioacuten costesbeneficios Las actuales medidas tienen un gran margen de incertidumbre contrario a la concrecioacuten que persiguen los proyectos cons-tructivos y la inversioacuten econoacutemica asociada Es en este contexto donde el presente libro pretende ha-cer su aportacioacuten

La mayor parte del conocimiento actual sobre el comportamiento ecoloacutegico de los espacios afectados por obras civiles se ha obtenido en poco maacutes de una deacutecada Entre las conclusiones relevantes alcanza-das desde esta perspectiva destacan

bull El perfil plano de los taludes es inestable

bull Los desmontes y terraplenes representan dos extremos en un gradiente de estreacutes-pro-ductividad

bull El reclutamiento de plantas en desmontes se produce en pequentildeas depresiones y oquedades

bull El contenido en nitroacutegeno de la tierra vegetal extendida en terraplenes explica el desarrollo de la cobertura vegetal en los primeros antildeos

bull Las comunidades vegetales densas de terra-plenes acogen un menor nuacutemero de espe-cies vegetales que las formaciones abiertas de los desmontes mostrando que cobertura y diversidad no van con frecuencia de la mano y por tanto hay que priorizar o lo uno o lo otro

bull Las hidrosiembras fracasan en desmontes y no son necesarias en condiciones favorables

bull La introduccioacuten de especies o ecotipos exoacuteti-cos en las mezclas de hidrosiembra comprome-te el establecimiento de las especies nativas

bull La llegada espontaacutenea de semillas es un or-den de magnitud mayor que el aporte de una hidrosiembra convencional

bull La gran mayoriacutea de las semillas que alcanzan un talud proceden de fragmentos proacuteximos de vegetacioacuten ruderal y arvense

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IacuteNDICE

bull La mayor parte de las especies vegetales que habitan en los taludes han sido dispersadas por el viento o la gravedad con escaso con-curso de animales dispersores

bull Las infraestructuras lineales generan una frag-mentacioacuten de las poblaciones de fauna que puede atenuarse mediante soluciones teacutecni-cas que aumenten la permeabilidad de la viacutea

Tanto la aplicacioacuten de las medidas correctoras como la investigacioacuten desde una perspectiva ecoloacutegica si-guen en gran medida enfocadas en el disentildeo de so-luciones a escala de talud En cuanto a las primeras se evaluacutean y facturan las hidrosiembras por metros cuadrados y se alternan los moacutedulos de plantacioacuten a lo largo del talud y las medianas En cuanto a la investigacioacuten se analizan las limitaciones para el asentamiento de la cubierta vegetal en parcelas cir-cunscritas a los taludes Asiacute se ha venido trabajando en los gradientes de disponibilidad de nutrientes o agua en el talud y en la respuestatolerancia de los vegetales frente a las condiciones locales Habitual-mente solo han escalado hasta el nivel de paisaje los estudios sobre movimientos de fauna y los toda-viacutea incipientes estudios sobre dispersioacuten de semillas y polinizacioacuten En el futuro las soluciones teacutecnicas avaladas por las conclusiones alcanzadas en los tra-bajos de investigacioacuten se orientaraacuten sin embargo hacia la escala del paisaje Asiacute el intereacutes de que esteacuten presentes determinadas especies no radicaraacute en que aportan mayor o menor cobertura sino en su significado a escala de paisaje quizaacutes como recurso para otros organismos de intereacutes que habiten en los maacutergenes de la viacutea quizaacutes como conector de pobla-ciones desvinculadas por la distancia quizaacutes como atractor de especies animales que aportan semillas o propaacutegulos de los que no se venden en los viveros comerciales o simplemente por constituir el mismo talud un refugio para especies que se han extinguido a escala de paisaje y regional

La necesidad de que las soluciones teacutecnicas se di-sentildeen a escala de paisaje vendraacute impuesta por los nuevos objetivos que se les exigiraacuten a los trabajos de integracioacuten ambiental Estos objetivos no seraacuten otros que la provisioacuten de ciertos servicios ecosisteacute-micos a un amplio espectro de potenciales benefi-ciarios de la existencia y funcionamiento de la viacutea El Millenium Ecosystem Assessment (2005) agrupa estos servicios en cuatro bloques de regulacioacuten de soporte de provisioacuten y culturales Pongamos al-gunos ejemplos de los servicios ecosisteacutemicos que podriacutea ofrecer una exitosa restauracioacuten ecoloacutegica de los espacios afectados por una carretera o viacutea feacuterrea

En relacioacuten con los servicios de regulacioacuten iquestpode-mos disentildear la integracioacuten ambiental de los taludes y otras zonas afectadas o generadas por la obra para que favorezcan la infiltracioacuten del agua de lluvia y la recarga de los acuiacuteferos Una eficaz infiltracioacuten reduciriacutea la erosioacuten en manto y la arroyada Pero en este contexto de la regulacioacuten la viacutea podriacutea utili-zarse como elemento de ordenacioacuten hidroloacutegica del territorio aumentando la extensioacuten de una cuenca vertiente o incluso canalizando la escorrentiacutea des-de una cuenca hacia otra

En relacioacuten con los servicios de soporte la restau-racioacuten de determinadas comunidades vegetales en los taludes podriacutea estar orientada por ejemplo a favorecer la propagacioacuten de polinizadores Estos po-linizadores podriacutean alcanzar asiacute en mayor nuacutemero los campos de cultivo y aumentar el rendimiento de las cosechas Las maacutergenes de las viacuteas podriacutean reproducir haacutebitats que funcionaran como refugio para especies de intereacutes como recurso geneacutetico O podriacutean habilitar los flujos de especies causados por un cambio climaacutetico o por la peacuterdida de su haacutebitat en origen Podriacutean ser corredores ecoloacutegicos con funciones ecoloacutegicas que permitieran movimientos de organismos alliacute donde estaacuten interrumpidos por la transformacioacuten del territorio (agricultura urbani-zacioacuten etc)

En relacioacuten con los servicios de provisioacuten la extensa superficie total que representa la suma de los es-pacios ocupados por taludes de carretera y de viacuteas feacuterreas es en siacute misma un recurso En la actuali-dad ese espacio es productivo pero la produccioacuten representa un coste en lugar de un beneficio En concreto el elevadiacutesimo coste de las siegas Coste elevado en ambientes mediterraacuteneos que alcanza niveles increiacutebles bajo climas maacutes favorables para el desarrollo de los vegetales iquestPodriacutea producirse en las maacutergenes de las viacuteas alguacuten bien que representara no solo un ingreso para los gestores de la infraestructu-ra sino un auteacutentico recurso para la poblacioacuten local Hoy en diacutea solo se cultivan los taludes en paiacuteses en desarrollo pero algunos paiacuteses avanzados como Holanda permiten el pastoreo de ovejas en los ta-ludes con lo que evitan las siegas Las opciones son muchas iquestPodriacuteamos generar biocombustibles o pacas de paja uacutetiles para la construccioacuten de determi-nados tipos de edificaciones

En relacioacuten con los servicios culturales el corte de la superficie terrestre que con frecuencia conlleva la construccioacuten de la viacutea pone al descubierto evi-dencias de extraordinario valor educativo y cientiacute-fico Son bien conocidos los enclaves en los que

la excavacioacuten de los desmontes dejoacute al descubierto una conspicua falla como la de El Molar (Madrid) o un singular pliegue como el lsquopliegue Zaleskirsquo tam-bieacuten en El Molar La construccioacuten de la viacutea no solo descubre peculiaridades geoloacutegicas sino tambieacuten restos arqueoloacutegicos y paleontoloacutegicos Fue la exca-vacioacuten para la construccioacuten de un tren la que des-tapoacute entre Atapuerca e Ibeas de los Juarros (Burgos) el yacimiento maacutes importante de la historia de la humanidad en Europa Pero ademaacutes y con indepen-dencia de las sorpresas que encierre la superficie de la tierra la restauracioacuten ecoloacutegica de los taludes de infraestructuras lineales podriacutea llegar a ambicio-nar la recuperacioacuten de paisajes En la actualidad nuestra silueta de humanos se recorta con frecuen-cia cotidiana sobre la superficie de taludes yermos o revestidos con cubiertas verdes anodinas El paisaje que podriacutea recrearse serviriacutea como recurso educa-tivo eso que ves se parece a una dehesa o a un hayedo o son espartales o sabinares o cardonales con tabaibas Nuestro devenir se enmarcariacutea en la singularidad de nuestro paisaje lo cual se opone a la extravagancia del gunitado a la vulgaridad cos-mopolita del asfalto del horizonte enladrillado o de los espacios perifeacutericos degradados La creacioacuten de estos espacios marginales genera usos marginales la construccioacuten de paisajes de calidad genera usos de calidad La recreacioacuten de paisajes en el entorno de la viacutea podriacutea cobrar un valor patrimonial es decir de herencia de nuestros ascendientes y por tanto tener un significado de identidad es decir de reco-nocimiento de los rasgos propios de cada colectivi-dad en interaccioacuten secular con su territorio Circular por una carretera permitiriacutea a los usuarios hacer tu-rismo no como lo hacen las mercanciacuteas sino perci-biendo el mosaico ecoloacutegico y cultural de la comarca que atraviesan

lsquoTout ce qursquoune personne peut imaginer un jour quelqursquoun le reacutealiserarsquo (Todo lo que una persona puede imaginar un diacutea alguien lo realizaraacute) como dijo el visionario Julio Verne La cuestioacuten es quieacuten o quieacutenes seraacuten los que lo realicen los artiacutefices del cambio de paradigma iquestA quieacuten corresponde ser pro-activo iquestQuizaacutes a las administraciones como respon-sables de una gestioacuten ambientalmente sostenible iquestA las administraciones como cadena de transmisioacuten del cambio en el nivel de exigencia de la sociedad iquestO seraacuten las empresas movidas por la buacutesqueda de nuevos mercados y de valores antildeadidos que les per-mitan competir con ventaja frente a otras anquilosa-das en los planteamientos convencionales

iquestExiste actualmente alguna ingenieriacutea o consul-tora capaz de redactar proyectos integrados en el

entorno y que ofrezcan servicios ecosisteacutemicos a la poblacioacuten En un futuro proacuteximo ingenieriacuteas cons-tructoras y concesionarias basaraacuten la calidad dife-rencial de su oferta en criterios ambientales Cons-truir carreteras y viacuteas feacuterreas cada vez se hace mejor se hace maacutes barato y cada vez lo hace maacutes gente Lo que todaviacutea no se hace es utilizar bases ecoloacute-gicas para integrar funcionalmente la infraestructura en el territorio que atraviesa Actualmente muchos interpretan este discurso como el de la dialeacutectica entre hacerlo maacutes barato o hacerlo ambientalmente maacutes ambicioso En el futuro descubriremos que lo ambientalmente maacutes ambicioso es a la larga lo maacutes barato Descubriremos como dice Paul Royal que lo estable es bueno y es bonito y que lo bonito y bueno es estable En el pasado se paseaba y en la actualidad solo se pasa Quizaacutes seamos en el futuro capaces de recuperar nuestro intereacutes por el propio camino

Con la intencioacuten de alentar el avance hacia otra for-ma de hacer las cosas este libro propone las si-guientes recomendaciones

Recomendacioacuten 1

La caracterizacioacuten del medio fiacutesico (litologiacutea cli-ma relieve suelo flora y vegetacioacuten fauna pai-saje medio social y cultural) debe ir orientada al diagnoacutestico de los factores que condicionan cada una de las soluciones teacutecnicas en cada uno de los enclaves singulares generados durante el proceso de construccioacuten de la infraestructura Por ejemplo el estudio del sustrato del clima y de la matriz deben permitir la toma de decisiones sobre si se hace una hidrosiembra y sobre cuaacuteles seriacutean las especies maacutes adecuadas a utilizar No tiene sentido el afaacuten enciclopeacutedico de reunir la maacutexi-ma cantidad de informacioacuten en el menor tiempo posible sobre todo si luego falta tiempo para su anaacutelisis criacutetico

Recomendacioacuten 2

El anaacutelisis de la termopluviometriacutea previo a cual-quier proyecto de restauracioacuten deberiacutea incluir va-riables hasta ahora no habituales en este tipo de estudios tales como el lsquoiacutendice de torrencialidadrsquo o el lsquopunto de marchitezrsquo del suelo Tales variables pueden llegar a ser maacutes limitantes para el eacutexito de la hidrosiembra que la precipitacioacuten media anual u otras habitualmente empleadas

En climas mediterraacuteneos la planificacioacuten de la obra deberiacutea facilitar la ejecucioacuten de hidrosiembras en

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el otontildeo como eacutepoca preferente en lugar de en primavera particularmente en zonas de inviernos suaves

Recomendacioacuten 3

Nunca deben proponerse soluciones generales su-puestamente vaacutelidas para el conjunto de los talu-des de la obra Desmontes y terraplenes son dos universos distintos como lo son los espacios que estuvieron ocupados por parques de maquinaria las superficies bajo pasos elevados o las medianas Cada uno de ellos requiere una solucioacuten teacutecnica in-dividualizada

Recomendacioacuten 4

Las hidrosiembras y plantaciones no son siempre necesarias Es preciso evaluar los costesbeneficios de la aplicacioacuten de estas teacutecnicas y evitarlas alliacute donde la calidad de la tierra vegetal y el grado de conservacioacuten del entorno son favorables asiacute como en aquellos enclaves o periodos del antildeo en los que las condiciones son tan desfavorables que la incer-tidumbre es muy elevada en comparacioacuten con el es-fuerzo e inversioacuten que conllevan

Recomendacioacuten 5

Debe prestarse especial atencioacuten a la combinacioacuten en el coacutectel de hidrosiembra de semillas pioneras (lsquostartersrsquo) junto con autoacutectonas de crecimiento len-to Las primeras pueden inhibir el crecimiento de las segundas cancelando los beneficios que se preten-diacutean alcanzar encareciendo notablemente el precio de la mezcla de semillas

Una adecuada diversidad en la mezcla favoreceraacute el proceso de sucesioacuten y facilitaraacute la estabilidad del sistema en el medio y largo plazo

Recomendacioacuten 6

El grado de integracioacuten ambiental no se mide al peso No se estaacuten haciendo mejor las cosas por in-crementar en el proyecto la potencia del extendido de tierra vegetal ni por incluir un mayor porcentaje de especies autoacutectonas en el coacutectel de hidrosiembra ni por exigir un porcentaje maacutes alto de cobertura vegetal El grado de integracioacuten ambiental debe ser evaluado por profesionales capaces de medir la co-nexioacuten con el entorno los flujos que interrumpe y que canaliza la infraestructura los servicios ambien-tales que ofrece y las consecuencias ambientales in situ y ex situ

Recomendacioacuten 7

Deben sopesarse cuidadosamente las actuaciones de dudosa eficacia tales como la instalacioacuten de ma-llas metaacutelicas redes tridimensionales de materiales plaacutesticos o redes de yute en desmontes de pendien-te mayor a 32 No ha podido demostrarse que estas medidas favorezcan el rendimiento de la hidrosiem-bra en taludes ubicados en climas mediterraacuteneos ni tan siquiera que reduzcan el efecto de la erosioacuten en el medio y largo plazo (en particular aquellas estruc-turas biodegradables)

Recomendacioacuten 8

Los elementos del sistema original que han sido el resultado de un proceso histoacuterico irrepetible ndasho que requeririacutea deacutecadas o siglosndash deben ser conservados en obra como bienes capaces de garantizar el eacutexito de las medidas correctoras En la construccioacuten de infraestructuras lineales estos elementos histoacuteri-cos son dos En primer lugar la tierra vegetal tanto por su fertilidad (contenido en nitroacutegeno disponible para los vegetales) como por su banco de semi-llas y formas de resistencia si se adecua su manejo en obra para conservar dicho banco Y en segundo lugar los fragmentos de vegetacioacuten conservada en las inmediaciones (cabeceras de desmontes pies de terraplenes) como fuente de diaacutesporas que alcan-zaraacuten de forma espontaacutenea y gratuita los taludes y medianas

Recomendacioacuten 9

La adecuada gestioacuten y posterior extendido de la tierra vegetal es siempre la medida correctora maacutes eficiente para la revegetacioacuten de los taludes con es-pecies herbaacuteceas de cuantas pueden acometerse en obra Es importante que el origen de la tierra sea local aunque su calidad agronoacutemica no sea suficien-te debido a que de esta manera se aporta el banco de semillas propio de las condiciones ecoloacutegicas del entorno En este sentido la tierra vegetal deberiacutea extraerse solo a partir de la capa maacutes superficial del terreno tras desbrozar (solo los primeros 5-10 cm en la mayor parte de los suelos estudiados en lugar de los 20-25 que se recomiendan actualmente en los proyectos)

Recomendacioacuten 10

Las actuales praacutecticas de gestioacuten de los acopios de tierra vegetal especialmente los abonados siembras y riegos no tienen efectos positivos En realidad contribuyen a diluir el banco y a reducir el nuacutemero

de semillas viables al inducir su germinacioacuten antes de que se realice el extendido

Recomendacioacuten 11

Debe cuidarse el espesor del extendido de tierra vegetal Extendidos de maacutes de 10 cm de potencia pueden generar problemas de inestabilidad y de enterramiento a excesiva profundidad de las semi-llas viables Circunstancias ambas que reducen la eficacia de la tierra vegetal a la hora de alcanzar los objetivos de revegetacioacuten de los taludes

Recomendacioacuten 12

Las especies lentildeosas pueden ser una buena alterna-tiva a las herbaacuteceas para revegetar taludes en am-bientes con elevado estreacutes hiacutedrico y suelos pobres Para ello las preparaciones someras del suelo de-ben ser descartadas y es fundamental emplear plan-ta de buena calidad morfoloacutegica y fisioloacutegica que haya sido cultivada a partir de semillas obtenidas de la zona de trabajo o de zonas ambientalmente si-milares Debe desterrarse la costumbre de supeditar los trabajos de revegetacioacuten a la inauguracioacuten de la obra llenando el espacio de lsquoverdersquo con la planta-cioacuten de plantas grandes y vistosas cultivadas en ma-ceta que deforman las raiacuteces No se estaacute haciendo un jardiacuten sino integrando ecoloacutegicamente la infra-estructura en el territorio La plantacioacuten de especies lentildeosas no finaliza con la plantacioacuten sino que el desarrollo adecuado de las plantas se garantiza con una serie de cuidados especiacuteficos

Recomendacioacuten 13

Las medidas correctoras en relacioacuten con la fauna deben disentildearse a escala de paisaje conectan-do flujos reales y deben estar fundadas en las

recomendaciones sobre la eficacia de los distintos pasos de fauna

Recomendacioacuten 14

La cicloacutepea inversioacuten de recursos humanos teacutecnicos y econoacutemicos realizada en la construccioacuten de la red de viacuteas feacuterreas y para el traacutefico rodado debe aprovechar-se para generar nuevo conocimiento sobre coacutemo inter-venir eficazmente en el medio sobre los nuevos esce-narios que los humanos estamos generando y sobre nosotros mismos y nuestra actividad en el medio

Recomendacioacuten 15

Es fundamental que el conocimiento sobre la dinaacute-mica de los espacios afectados por infraestructuras lineales y el eacutexito de los tratamientos y medidas preventivas correctoras y compensatorias no se ge-nere exclusivamente mediante el meacutetodo de mejora continua basado en la mecaacutenica del ensayo error Es esencial que estos procedimientos se complementen con otros mucho maacutes eficaces conocidos como de gestioacuten adaptativa en los que el meacutetodo contras-ta hipoacutetesis concretas utilizando parcelas control y disentildeos experimentales propios de la investigacioacuten cientiacutefica

Recomendacioacuten 16

Es necesario promover escenarios efectivamente interdisciplinares donde los diversos condicio-nantes de caraacutecter teacutecnico normativo etc sean conocidos por todos los actores participantes en las distintas fases del ciclo de vida de una infra-estructura con el objeto de diagnosticar y corregir ineficacias y contradicciones en las fases de redac-cioacuten de proyectos construccioacuten y explotacioacuten de las infraestructuras

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1Fuentes recomendadas de informacioacuten adicional

Anexo

IacuteNDICE

313

IacuteNDICE

ANEXO 1 Fuentes recomendadas de informacioacuten adicional

BIBLIOGRAFIacuteA BAacuteSICA

Espantildea

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Garciacutea-Fayos P (coord) 2001 Bases ecoloacutegicas para la recoleccioacuten almacenamiento y germinacioacuten de se-millas de especies de uso forestal de la Comunidad Valenciana Banc de Llavors Forestals (Conselleria de Medi Ambient Generalitat Valenciana) Alboraya (Va-lencia) 82 pp

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Jorba M y VR Vallejo 2010 Manual para la res-tauracioacuten de canteras de roca calcaacuterea en clima me-diterraacuteneo Generalitat de Cataluntildea Contiene infor-macioacuten importante y fichas con recomendaciones so-bre queacute hacer en diferentes situaciones (pendientes altas-bajas tipos de suelo climas distintos)

Ministerio de Medio Ambiente 2006 Prescripciones teacutecnicas para el disentildeo de pasos de fauna y vallados perimetrales Documentos para la reduccioacuten de la fragmentacioacuten de haacutebitats causada por infraestruc-turas de transporte nuacutemero 1 OA Parques Nacio-nales Ministerio de Medio Ambiente 108 pp Madrid

Ministerio de Medio Ambiente 2008 Prescripciones teacutecnicas para el seguimiento y evaluacioacuten de las medidas correctoras destinadas a reducir el impacto de las infraestructuras lineales sobre la fauna Docu-mento 2 de la Serie de Documentos para la Reduc-cioacuten de la Fragmentacioacuten de Haacutebitats causada por Infraestructuras de Transporte publicada por el OA Parques Nacionales del Ministerio de Medio Ambien-te 115 pp Madrid

Ministerio de Medio Ambiente y Medio Rural y Mari-no 2010 Prescripciones teacutecnicas para la reduccioacuten de la fragmentacioacuten de haacutebitats en la fase de plani-ficacioacuten y trazado Documentos 3 de la Serie de Do-cumentos para la Reduccioacuten de la Fragmentacioacuten de Haacutebitats causada por Infraestructuras de Transporte publicada por el OA Parques Nacionales del Minis-terio de Medio Ambiente y Medio Rural y Marino 145 pp Madrid

Navarro Cerrillo RM y Gaacutelvez Ramiacuterez C 2001 Ma-nual para la identificacioacuten y reproduccioacuten de semi-llas de especies vegetales autoacutectonas de Andaluciacutea Consejeriacutea de Medio Ambiente Sevilla 390 pp

Oliet Palaacute J Navarro Cerrillo RM y Contreras Ata-laya O 2003 Evaluacioacuten de la aplicacioacuten de tubos y mejoradores en repoblaciones forestales Consejeriacutea de Medio Ambiente Junta de Andaluciacutea Sevilla 234 pp Una obra muy completa sobre el efecto de distin-tos tipos de tubos protectores en diversas especies mediterraacuteneas

Prada MA y A Arizpe 2008 (coord) Manual de propagacioacuten de aacuterboles y arbustos de ribera Una ayuda para la restauracioacuten de riberas en la regioacuten mediterraacutenea Generalitat Valenciana Valencia ISBN 978-84-482-4964-9

Ramos-Otero del Peral L 1997 Teacutecnicas de re-vegetacioacuten El capiacutetulo de las plantaciones en la

contratacioacuten de las infraestructuras viarias ministe-rio de Fomento

Rey-Benayas JM 2007 Restauracioacuten de ecosiste-mas mediterraacuteneos Coleccioacuten Aula Abierta nordm 20 Universidad de Alcalaacute Contiene un capiacutetulo sobre restauracioacuten de taludes escrito por Carmen Mataix donde se detallan numerosas teacutecnicas de ecotecnolo-giacutea de intereacutes Tambieacuten tiene un capitulo sobre la im-portancia de la calidad de la planta en los proyectos de revegetacioacuten

Rosell C y JM Velasco 1999 Manual de prevencioacute i correcioacute dels impactes de les infraestructures viaacute-ries sobre la fauna Generalitat de Catalunya Depar-tamet de Medi Ambient Catalunya

Velasco JM M Yanes y F Suaacuterez 1995 El Efecto Barrera en Vertebrados Medidas Correctoras en las viacuteas de comunicacioacuten CEDEX Madrid

Aacutembito internacional

Coppin NJ y IG Richards (Eds) 1990 Use of Ve-getation in Civil Engineering Construction Industry Research and Information Association (CIRIA) But-terworths London

Forman R D Sperling JA Bissonette AP Cleven-ger CD Cutshall VH Dale L Fahrig R France CR Goldman K Heanue JA Jones FJ Swanson T Turrentine y TC Winter 2003 Road Ecology Science and Solutions Island Press Washington DC 479 pp

Gray DH y RB Situr 1996 Biotechnical and Soil Boengineering slope stabilization A practical gui-de for erosion control ndash JWiley and Sons New York

Iuell B HGJ Bekker R Cuperus J Dufek G Fry C Hicks V Hlavaacutec V Keacuteller C Rosell T Sangwine N Torslow y B Wandall 2005 Fauna y Traacutefico Manual europeo para identificar conflictos y disentildear solucio-nes COST 341 Fragmentacioacuten del haacutebitat causada por las infraestructuras de transporte Ministerio de Medio Ambiente 166 pp Madrid

Kangas PC 2004 Ecological Engineering Principles and Practice Lewis Puslishers CRC Press Boca Ra-ton Florida

Landis T (Ed) The Container Tree Nursery Manual Forest Service USDA Handbook 674

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Lewis EA 1999 Soil Bioengineering An alternative for Roadside Management A Practical Guide United States Forest Service San Dimas Technology and Development Center San Dimas California Informa-cioacuten detallada y fichas sobre distintas teacutecnicas eco-tecnoloacutegicas

Oliveira G 2008 Plantaciones Curso Teacutecnico de Restauracioacuten Ecoloacutegica de Canteras Outatildeo (Setuacute-bal) Portugal 24 ndash 27 09 2008

Piotto B y A di Noi 2003 Seed propagation of mediterranean trees and shrubs APAT - Agency for the protection of the environment and for technical services Roma 108 p

Society for Ecological Restoration International 2004 The SER International Primer on Ecological Restoration Society for Ecological Restoration Inter-national Science amp Policy Working Group (Version 2 October 2004)

Steinfeld DE 2007 Roadside revegetation An inte-grated approach to establishing native plants Fede-ral Highway Administration Western Federal Lands Highway Division Vancouver Canadaacute

SITIOS INTERESANTES EN INTERNET

Acceso a la metodologiacutea para realizar el Landsca-pe Function Analysis (LFA) y comprobar el estado funcional en el que se encuentran los taludes (ver capiacutetulo de vigilancia ambiental) httpwwwcsiroauservicesEcosystemFunctionAnalysishtml

Ministerio de Medio Ambiente y Medio Rural y Marino Seccioacuten Biodiversidad Conectividad ecoloacutegica en el territorio Fragmentacioacuten Esta paacutegina web da acceso a todos los documentos elaborados por la Comisioacuten Teacutecnica del Grupo de Trabajo de Fragmentacioacuten de

Haacutebitats causada por Infraestructuras de Transporte httpwwwmmaesportalseccionesbiodiversidadde-sarrollo_rural_paisajefragmentacion_ruralindexhtm

Infra Eco Network Europe Red europea constituida por diferentes organizaciones institutos y expertos unidos por un intereacutes comuacuten que es el fenoacutemeno de la fragmentacioacuten de haacutebitats causado por la cons-truccioacuten de infraestructuras lineales de transporte httpwwwcbmsluseiene

International Conference on Ecology and Transporta-tion (ICOET) Interesante paacutegina web para estar al diacutea de los uacuteltimos avances en temas relacionados con los distintos impactos generados por las infraestructuras de transporte Permite el acceso a todos los trabajos presentados en esta conferencia que se celebra cada dos antildeos httpwwwicoetnetindexasp

Road Ecology Center de la Universidad de Davis California (EEUU) Portal de acceso de este centro especializado Ofrece informacioacuten muy variada no solo de sus investigaciones tambieacuten de congresos y seminarios interesantes relacionados con estos temas y ademaacutes poseen un buscador bibliograacutefico muy completo httproadecologyucdavisedu

The Reforestation reforestation and genetic resour-ces team (RNGR Team) Paacutegina web con gran canti-dad de informacioacuten sobre cultivo de plantas y teacutecni-cas de reforestacioacuten httpwwwrngrnet

Atlas de Idoneidad de especies lentildeosas de la Peniacuten-sula Ibeacuterica Puede ser uacutetil para ver si las especies lentildeosas elegidas son climaacuteticamente idoacuteneas para la zona de revegetacioacuten httpwwwopengisuabcatIdoneitatPIindexhtml

Servicio de extensioacuten Forestal de la Universidad de Oregon Tiene algunas publicaciones sobre planta-cioacuten y preparacioacuten del suelo httpextensionore-gonstateeducatalogdetailsphpsortnum=0520ampname=Reforestation

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ANEX

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2Sobre los autores y revisores del libro

Anexo

IacuteNDICE

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IacuteNDICE

ANEXO 2 Sobre los autores y revisores del libro

Este libro ha sido el resultado de una labor colectiva que ha permitido reunir experiencias y conocimien-tos dispares y complementarios en un tema que em-pieza a consolidarse aunque todaviacutea de forma frag-mentaria A continuacioacuten se describen brevemente los perfiles de los maacutes de treinta autores implicados en la obra y se indican los revisores externos de los textos e ideas incluidas en esta edicioacuten Todos los autores han participado en varias reuniones de coordinacioacuten de los capiacutetulos y han servido de revi-sores internos de uno o varios capiacutetulos adicionales a los que han participado para armonizar contenidos y estructura

Editores

Fernando Valladares es doctor en Ciencias Bioloacutegi-cas profesor de investigacioacuten del Consejo Superior de Investigaciones Cientiacuteficas (CSIC) y profesor aso-ciado de la Universidad Rey Juan Carlos Su investi-gacioacuten se centra en la ecologiacutea de los sistemas natu-rales afectados o amenazados por el cambio global y dedica importantes esfuerzos al estudio y a la do-cencia de aspectos relacionados con su restauracioacuten Actualmente su direccioacuten de trabajo es Centro de Museo Nacional de Ciencias Naturales CSIC Serrano 115 dpdo 28006 Madrid Maacutes informacioacuten en wwwvalladaresinfo E-mail valladaresccmacsices

Luis Balaguer Nuacutentildeez es profesor titular de Univer-sidad del Departamento de Biologiacutea Vegetal I de la Facultad de Biologiacutea de la Universidad Complutense de Madrid Es especialista en restauracioacuten ecoloacutegica

que entiende como una disciplina que se apoya en tres pilares la conservacioacuten del capital natural orientada a la provisioacuten de bienes valores y servi-cios ecosisteacutemicos la integracioacuten holiacutestica que con-templa ademaacutes de criterios cientiacuteficos criterios so-cioeconoacutemicos valores culturales y personales y la gestioacuten adaptativa entendida como estrategia para el manejo de sistemas complejos Maacutes informacioacuten en httplinneobioucmesbalaguer

Ignacio Mola Caballero de Rodas es licenciado en Ciencias Bioloacutegicas En la actualidad coordina los proyectos de investigacioacuten nacionales e internacio-nales en restauracioacuten de espacios afectados por obra civil desarrollados por la Direccioacuten de Innovacioacuten y Desarrollo de OHL Colabora en la docencia de tres maacutesteres oficiales y varias asignaturas en distintas universidades puacuteblicas de la Comunidad de Madrid Desde 2005 desarrolla su actividad investigadora en el aacutembito de la restauracioacuten ecoloacutegica de infraestruc-turas de transporte (UCM 910314) Actualmente su direccioacuten de trabajo es Servicio de I+D+i - OHL Pordm de la Castellana 259-D 28046-Madrid E-mail imo-laohles

Adriaacuten Escudero es doctor en Ciencias Bioloacutegicas y catedraacutetico de ecologiacutea en la Universidad Rey Juan Carlos Su intereacutes cientiacutefico se centra en diversos aspectos de ecologiacutea de poblaciones y comunidades de plantas Su investigacioacuten y docencia se enfocan con frecuencia a problemas ambientales concretos dentro del campo de la biologiacutea de la conservacioacuten Actualmente su direccioacuten de trabajo es Departamen-to de Biologiacutea y Geologiacutea Escuela Superior de Cien-cias Experimentales y Tecnologiacutea Universidad Rey Juan Carlos 28933 Madrid Maacutes informacioacuten en httpwwwesceturjcesbiodiversos E-mail adrianescuderourjces

Valentiacuten Alfaya es Licenciado en Ciencias Bioloacutegicas y diplomado en Ingenieriacutea y Gestioacuten Medioambien-tal por la EOI Trabajoacute en el sector forestal y de ingenieriacutea para pasar posteriormente a la construc-tora Ferrovial Agromaacuten donde se responsabilizoacute de la implantacioacuten del primer sistema de gestioacuten ambiental disentildeado para el sector En 2002 fue nombrado director de Calidad Prevencioacuten y Medio Ambiente y pasoacute a formar parte del Comiteacute de Di-reccioacuten Desde 2004 ocupa el puesto de director de Calidad y Medio Ambiente de Grupo Ferrovial Ha sido miembro de la Plataforma Tecnoloacutegica Europea de la Construccioacuten del Comiteacute de Medio Ambiente de la patronal de empresas constructoras (SEOPAN) y del Strategic Advisory Group de ISO entre otras instituciones Forma parte de la Comisioacuten de Medio

Ambiente de la CEOE y es secretario del comiteacute ejecutivo de Green Building Council Espantildea Im-parte docencia en diversas escuelas de negocios y centros universitarios Asimismo desarrolla su tesis doctoral en el Departamento de Biologiacutea Vegetal de la Universidad Complutense de Madrid E-mail valentinalfayaferroviales

Autores

Saturnino de Alba Alonso es doctor en Ciencias pro-fesor titular en el Departamento de Geodinaacutemica de la Universidad Complutense de Madrid y miembro del Instituto de Geociencias (CSIC-UCM) Su activi-dad cientiacutefica se centra en la conservacioacuten de suelos en medios agriacutecolas y forestales y en escenarios de restauracioacuten de espacios fuertemente modificados por actividades humanas como es el caso de las in-fraestructuras lineales Actualmente su direccioacuten de trabajo es Departamento de Geodinaacutemica Facultad de Ciencias Geoloacutegicas Universidad Complutense de Madrid CJoseacute Antonio Novais sn 28040 Madrid E-mail sdealbageoucmes

Jesuacutes Aacutelvarez es ingeniero de Caminos Canales y Puertos por la Universidad Politeacutecnica de Madrid y maacutester en Gestioacuten Ambiental por la EOI Es direc-tor de Medio Ambiente de Cintra Infraestructuras empresa liacuteder en la gestioacuten de infraestructuras de transporte con maacutes de 2500 kiloacutemetros de autopis-tas distribuidas por diferentes paiacuteses de Europa y Ameacuterica E-mail jalvarezcintraes

Francisco Xavier Artigas Iraegui es ingeniero de Mon-tes e ingeniero teacutecnico forestal por la Universitat de Lleida Su vida laboral se ha centrado en los uacuteltimos antildeos en la evaluacioacuten ambiental de planes progra-mas y proyectos principalmente de infraestructuras lineales Actualmente su direccioacuten de trabajo es Ofi-cina Territorial de Evaluacioacuten Ambiental Servicios Te-rritoriales del Departamento de Medio Ambiente y Vi-vienda en Tarragona Vidal i Barraquer 12-14 43005 Tarragona E-mail xavierartigasgencatcat

Fernando Barbero Abolafio es licenciado en Cien-cias Geoloacutegicas e investigador predoctoral en la Universidad Complutense de Madrid Su investiga-cioacuten se centra en la erosioacuten hiacutedrica en suelos de clima mediterraacuteneo Actualmente estaacute estudiando los procesos de erosioacuten hiacutedrica que tienen lugar en taludes de carretera de la Cuenca de Madrid para poder aplicar criterios geomorfoloacutegicos y tratamien-tos al suelo que prevengan la erosioacuten hiacutedrica y fa-vorezcan una correcta revegetacioacuten Su direccioacuten de

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IacuteNDICE

trabajo es Departamento de Geodinaacutemica Facultad de Ciencias Geoloacutegicas Universidad Complutense de Madrid CJoseacute Antonio Novais 28040 Madrid E-mail ferbarabgeoucmes

Esther Bochet es doctora en Biologiacutea por la Universi-dad Catoacutelica de Lovaina (KUL Beacutelgica) Tras ser con-tratada por el programa Ramoacuten y Cajal disfruta en la actualidad de un contrato de doctora en el Centro de Investigaciones sobre Desertificacioacuten (CIDE) donde desarrolla sus investigaciones sobre las interaccio-nes entre vegetacioacuten y erosioacuten del suelo asiacute como su aplicacioacuten a la restauracioacuten de ecosistemas me-diterraacuteneos semiaacuteridos degradados Actualmente su direccioacuten de trabajo es Centro de Investigaciones sobre Desertificacioacuten-CIDE Carretera de Moncada a Naacutequera km 45 Apdo Oficial 46113 Moncada (Va-lencia) E-mail estherbochetuves

Valentiacuten Contreras Medrano es ingeniero teacutecnico agriacute-cola Director General del Grupo de empresas Bonte-rra Ibeacuterica ndash Paisajes del Sur (BPS GROUP) para el tratamiento integral del suelo Experto en materiales y teacutecnicas de restauracioacuten del paisaje ha desarrollado su actividad teacutecnica y empresarial desde 1992 E-mail valentincontrerasbonterraibericacom

Jordi Cortina Segarra es profesor titular de Ecologiacutea en la Universidad de Alicante Su trabajo se ha concen-trado en el estudio de la degradacioacuten de los ecosis-temas semiaacuteridos y su restauracioacuten Actualmente estaacute estudiando el funcionamiento de algunos ecosistemas mediterraacuteneos asiacute como teacutecnicas para la restauracioacuten de ecosistemas degradados incluyendo algunas fases de la produccioacuten de planta en vivero y la utilizacioacuten de residuos orgaacutenicos para la recuperacioacuten de la ferti-lidad de suelos degradados E-mail jordiuaes

Tiacutescar Espigares Pinilla es profesora titular de Ecolo-giacutea de la Universidad de Alcalaacute Su investigacioacuten se centra en el estudio de la ecohidrologiacutea de ecosis-temas restaurados con especial eacutenfasis en las inte-racciones entre vegetacioacuten y escorrentiacutea superficial en los procesos de sucesioacuten ecoloacutegica Asimismo ha analizado la aplicacioacuten de la evaluacioacuten del impac-to ambiental en Espantildea en lo referente a proyectos de infraestructuras lineales Departamento de Eco-logiacutea Universidad de Alcalaacute Campus Universitario Ctra Madrid-Barcelona Km 33600 28871 Alcalaacute de Henares (Madrid) E-mail mtiscarespigaresuahes

Joacirco Paulo Fernandes es licenciado en Ingenieriacutea Am-biental en 1983 en la Universidad Nueva de Lisboa donde se doctoroacute en 1992 en Ciencias Ambientales Actualmente es profesor asociado en la Universidad

de Eacutevora y responsable de la Licenciatura en Inge-nieriacutea Biofiacutesica Es especialista en temas de Ingenie-riacutea Natural y de Caracterizacioacuten y Evaluacioacuten Ambien-tal habiendo desarrollado investigaciones en estos campos y participado como Consultor en numerosos Estudios de Evaluacioacuten de Impacto Ambiental y Pro-cesos de Planificacioacuten Es fundador y presidente de APENA ndash Asociacioacuten Portuguesa de Ingenieriacutea Natu-ral

Jorge Fort Llaacutecer es ingeniero agroacutenomo con espe-cialidad en Ciencias del Suelo y Gestioacuten del Medio Ambiente Desde 1998 es director teacutecnico del Depar-tamento de Medio Ambiente de la empresa Projar SA que cuenta entre sus proyectos con numerosas teacutecnicas de revegetacioacuten de taludes E-mail jorgeprojares

Pablo Garciacutea-Palacios es licenciado en Ciencias Ambientales por la Universidad Rey Juan Carlos e investigador predoctoral del proyecto EXPERTAL fi-nanciado por la Fundacioacuten Biodiversidad CSIC Uni-versidad Rey Juan Carlos y Cintra SA Actualmente realiza su tesis doctoral sobre las implicaciones de las interacciones planta-suelo en la restauracioacuten de taludes de carretera Su direccioacuten de trabajo es Universidad Rey Juan Carlos Escuela Superior de Ciencias Experimentales y Tecnologiacutea Aacuterea de Bio-diversidad y Conservacioacuten Despacho II-230 CTuli-paacuten sn 28933 Moacutestoles (Madrid) E-mail pablopalaciosurjces

Patricio Garciacutea-Fayos es investigador cientiacutefico del Consejo Superior de Investigaciones Cientiacuteficas (CSIC) y desarrolla su actividad profesional en el Centro de Investigaciones sobre Desertificacioacuten-(CIDE) desde 1989 Su intereacutes investigador se centra fundamentalmente en los procesos de colonizacioacuten vegetal en ecosistemas mediterraacuteneos y semiaacuteridos y en la ecologiacutea y evolucioacuten de la interaccioacuten entre las plantas y la erosioacuten del suelo Actualmente su direccioacuten de trabajo es Centro de Investigaciones sobre Desertificacioacuten-CIDE Carretera de Moncada a Naacutequera km 45 Apdo Oficial 46113 Moncada (Va-lencia) E-mail PatricioGarcia-Fayosuves

Carlos Iglesias Merchaacuten es ingeniero de Montes (UPM) y licenciado en Ciencias Ambientales (UAM) posee larga experiencia en la redaccioacuten de proyectos y estudios de impacto ambiental de infraestructuras de transporte actualmente en ACCIONA INGENIERIacuteA (antes AEPO) y en vigilancia ambiental de obra Ade-maacutes es profesor asociado de la Universidad Politeacutec-nica de Madrid y actual presidente de ECOPAacuteS Ac-tualmente su direccioacuten de trabajo es ECOPAacuteS Apdo

de Correos 150 28760 Tres Cantos (Madrid) E-mail carlosiglesiasmerchanaccionaes

Juan E Malo Arraacutezola es doctor en Ciencias Bioloacute-gicas y profesor titular de Ecologiacutea de la Universi-dad Autoacutenoma de Madrid forma parte del Grupo de Ecologiacutea y Conservacioacuten de Sistemas Terrestres del Departamento de Ecologiacutea de dicha universidad Su intereacutes se centra en las interacciones ecoloacutegicas en-tre la fauna y las actividades humanas con especial atencioacuten en la evaluacioacuten de impacto ambiental de las infraestructuras y la fragmentacioacuten de haacutebitats E-mail jemalouames

Joseacute Francisco Martiacuten Duque es doctor en Ciencias Geoloacutegicas profesor titular en el Departamento de Geodinaacutemica de la Universidad Complutense de Ma-drid y miembro del Instituto de Geociencias (CSIC-UCM) Su intereacutes se centra en el establecimiento de criterios geomorfoloacutegicos para la restauracioacuten y re-habilitacioacuten de terrenos afectados por movimientos de tierras (como mineriacutea o infraestructuras lineales) Actualmente su direccioacuten de trabajo es Departamen-to de Geodinaacutemica Facultad de Ciencias Geoloacutegicas Universidad Complutense de Madrid CJoseacute Antonio Novais 28040 Madrid

Javier Martiacutenez de Castilla Colomer es ingeniero agroacute-nomo por la Universitat Politeacutecnica de Catalunya Jefe del Departamento de Medio Ambiente de la Direccioacuten Teacutecnica de Ferrovial Agromaacuten desarrolla desde 1986 toda su actividad en la evaluacioacuten ambiental y disentildeo de medidas en el aacutembito de la obra civil tanto en Espantildea como Reino Unido Estados Unidos Portugal Irlanda Polonia e Italia entre otros paiacuteses Miembro del Comiteacute de Medio de la Asociacioacuten Teacutecnica de la Carretera E-mail jmcastillaferroviales

Marisa Martiacutenez Diacuteez es ingeniera teacutecnica forestal por la Universidad Politeacutecnica de Madrid En los uacuteltimos 17 antildeos ha desarrollado su actividad pro-fesional en el sector medioambiental Actualmente trabaja en la empresa Ingenieriacutea de los Recursos Na-turales (IRENA) como jefe del Departamento Teacutecnico participando en obras y proyectos de restauracioacuten paisajiacutestica jardineriacutea y trabajos forestales E-mail mmartinezgrupopacsaes

Cristina Mata Estacioacute es investigadora posdoctoral del Grupo de Ecologiacutea y Conservacioacuten de Sistemas Terres-tres del Departamento de Ecologiacutea de la Universidad Autoacutenoma de Madrid Su principal aacuterea de investiga-cioacuten se centra en el seguimiento y evaluacioacuten de medi-das correctoras destinadas a reducir la fragmentacioacuten de haacutebitats causada por infraestructuras de transporte

Luis Merino Martiacuten es licenciado en Ciencias Ambien-tales y doctor en Cambio Global y Desarrollo Soste-nible por la Universidad de Alcalaacute Su investigacioacuten se centra en ecohidrologiacutea de ecosistemas degrada-dos particularmente los derivados de la restaura-cioacuten minera Actualmente trabaja en restauracioacuten de bosques tropicales en Guatemala Departamento de Ecologiacutea Universidad de Alcalaacute Campus Universita-rio Ctra Madrid-Barcelona Km 33600 28871 Alcalaacute de Henares (Madrid) E-mail luismerinouahes

Mariano Moreno de las Heras es investigador post-doctoral en la Universidad de Newcastle (Australia) Licenciado en Ciencias Ambientales y Doctor por la Universidad de Alcalaacute Sus investigaciones se centran en aspectos ecohidroloacutegicos de ambientes aacuteridos y semiaacuteridos particularmente en las interacciones en-tre la dinaacutemica vegetal y los procesos hidroloacutegicos superficiales (erosioacuten y sedimentacioacuten generacioacuten de escorrentiacutea y distribucioacuten espacial de la hume-dad del suelo) en el marco actual de cambios en el clima y los usos del territorio Faculty of Engineer-ing and Built Environment School of Engineering The University of Newcastle Callaghan NSW 2308 Australia E-mail MarianoMorenodelasherasnew-castleeduau

Joseacute Manuel Nicolau Ibarra es profesor titular de Ecologiacutea en la Universidad de Zaragoza Su inves-tigacioacuten se centra en ecohidrologiacutea de ambientes semiaacuteridos y de aacutereas mineras restauradas y en di-sentildeos geomorfoloacutegicos para restauraciones mineras Escuela Politeacutecnica Superior de Huesca Universidad de Zaragoza Carretera de Cuarte sn 22071 Huesca E-mail nicolauunizares

Begontildea Peco es doctora en Biologiacutea en 1982 y cate-draacutetica de Ecologiacutea de la Universidad Autoacutenoma de Madrid Tiene maacutes de 100 publicaciones cientiacuteficas muchas de ellas en revistas de impacto internacional como Journal of Ecology Oikos Journal of Vegetation Science Landscape Ecology etc y ha dirigido siete tesis doctorales y numerosos proyectos fin de carrera y fin de maacutester Especialista en dinaacutemica de la vege-tacioacuten herbaacutecea con eacutenfasis en la dispersioacuten de semi-llas estructura y dinaacutemica de los bancos de semillas y supervivencia de plaacutentulas Actualmente su direccioacuten de trabajo es Departamento de Ecologiacutea Universidad Autoacutenoma de Madrid 28049 Cantoblanco Madrid E-mail begonnapecouames

Joseacute Luis Quero es licenciado en Biologiacutea por la Universidad de Coacuterdoba doctor en Biologiacutea Ambiental por la Universidad de Granada e in-vestigador de la Universidad Rey Juan Carlos Sus

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liacuteneas de trabajo se centran en la ecologiacutea de co-munidades vegetales y su relacioacuten con la ecolo-giacutea funcional con especial intereacutes en la aplica-cioacuten de sus resultados a la restauracioacuten Actual-mente su direccioacuten de trabajo es Departamento de Biologiacutea y Geologiacutea Escuela Superior de Ciencias Experimentales y Tecnologiacutea Universidad Rey Juan Carlos 28933 Moacutestoles Madrid E-mail joseque-rourjces

Santiago Soliveres Codina es doctor en Ciencias Ambientales por la Universidad Rey Juan Carlos Realiza su trabajo en el marco del proyecto EXPER-TAL financiado por la Fundacioacuten Biodiversidad CSIC Universidad Rey Juan Carlos y Cintra SA Su especialidad es el estudio de las interacciones planta-planta y su aplicacioacuten a la restauracioacuten E-mail santiagosoliveresurjces

Jaume Tormo es doctor en Biologiacutea su tesis doc-toral tratoacute sobre restauracioacuten de taludes de carre-teras Actualmente disfruta de un contrato Juan de la Cierva en la Universidad de Alicante Su trabajo se centra en el estudio de la ecologiacutea y la restau-racioacuten de ambientes semiaacuteridos Actualmente su direccioacuten de trabajo es IMEM Ramon Margalef-Universidad de Alicante Carretera San Vicente del Raspeig sn 03690 San Vicente del Raspeig ndash Ali-cante E-mail jautorblagmailcom

Pedro Villar-Salvador es doctor en Biologiacutea por la Universidad de Valencia y actualmente es profesor de Ecologiacutea en el Departamento de Ecologiacutea de la Universidad de Alcalaacute Tambieacuten es editor asocia-do de la revista cientiacutefica New Forests Su intereacutes cientiacutefico son la ecologiacutea funcional y ecofisiologiacutea de plantas lentildeosas mediterraacuteneas asiacute como las teacutecnicas de cultivo en vivero e implantacioacuten en campo de la vegetacioacuten lentildeosa mediterraacutenea Su direccioacuten de contacto es Departamento de Ecolo-giacutea Universidad de Alcalaacute 28871 Alcalaacute de Hena-res (Madrid) E-mail pedrovillaruahes

Revisores externos

bull Revisor externo del Capiacutetulo 2

Avelino Garciacutea Investigador del CIEMAT Madrid

bull Revisor externo del Capiacutetulo 4

Antonio Gallardo Correa Profesor titular de la Uni-versidad Pablo de Olavide Sevilla

bull Revisores externos del Capiacutetulo 5

Montse Jorba Peiroacute Investigadora Fundacioacuten Bosch Gimpera Departamento de Biologiacutea Vege-tal Facultad de Biologiacutea Universidad de Barce-lona

Carolina Martinez Ruiz Profesora titular de la Univer-sidad de Valladolid Aacuterea de Ecologia (Departamento de Ciencias Agroforestales) ETSIIAA de Palencia Campus ldquoLa Yuterardquo Palencia

bull Revisores externos del Capiacutetulo 6

Luis Ocantildea Bueno Jefe de Departamento de Medio Natural Direccioacuten Adjunta de I+D+i RampD Unit Grupo Tragsa C Juliaacuten Camarillo 6b - planta 4ordf - sector d 28037 Madrid

Roberto Ontantildeoacuten Bioacutelogo Iniciativas Medioambien-tales IMAVE SL C El Cantildeo 5 24231 Cembranos Leoacuten

bull Revisores externos del Capiacutetulo 8

Encarna Peacuterez Aguilera Direccioacuten General de Carrete-ras e Infraestructuras Consejeriacutea de Fomento Junta de Castilla y Leoacuten

Salvador Peris Aacutelvarez y Viacutector Colino Rabanal De-partamento de Biologiacutea Animal Parasitologiacutea Ecolo-giacutea Edafologiacutea y Quiacutemica Agriacutecola Facultad de Bio-logiacutea Universidad de Salamanca

bull Revisores externos del Capiacutetulo 9

Rafael Escribano Bombiacuten Profesor titular del Depar-tamento de Proyectos y Planificacioacuten Rural Universi-dad Politeacutecnica de Madrid

Germaacuten Glariacutea Galceraacuten Director de la EUIT Forestal y ex director general de Calidad y Evaluacioacuten Am-biental del Ministerio de Medio Ambiente

bull Revisores externos del Capiacutetulo 10

Mauricio Goacutemez Villarino Doctor ingeniero de Ca-minos Canales y Puertos IDOM - Director Corpo-rativo

Santiago Gonzaacutelez Alonso Catedraacutetico de Proyectos y Planificacioacuten y ex subdirector general de Planifi-cacioacuten y Normativa del Ministerio de Obras Puacuteblicas y Urbanismo

Fernando Valladares

Luis Balaguer

Ignacio Mola

Adriaacuten Escudero

Valentiacuten Alfaya

Restauracioacuten ecoloacutegica de aacutereas afectadaspor infraestructuras de transporte

Vivimos en un mundo atravesado por carreteras liacuteneas de tren gasoductos y tendidos eleacutectricos Aunque nos hemos acostumbrado a ello los sistemas naturales no En este libro se revisan los impactos principales de la alteracioacuten ambiental que implica la creacioacuten y el uso de las infraestructuras lineales y se abordan los principales criterios cientiacutefi cos para reconducir y atenuar estos impactos Pero el libro no es solo un tratado cientiacutefi co sino que incluye ingredientes clave como los aspectos teacutecnicos y el marco legal para que sirva de referencia uacutetil y completa a quienes les interese la restauracioacuten ecoloacutegica de estos nuevos ecosistemas generados con la construccioacuten de infraestructuras lineales El libro busca estimular la interaccioacuten feacutertil entre cientiacutefi cos y teacutecnicos para abordar un tema ambiental legal social y econoacutemicamente complejo como es el de queacute ocurre y queacute conviene hacer con las aacutereas afectadas por estas infraestructuras Para contribuir a esta interaccioacuten el libro reuacutene el trabajo y la experiencia de maacutes de treinta expertos y recopila la informacioacuten de numerosos proyectos tanto de investigacioacuten como de construccioacuten y de restauracioacuten aportando una seleccioacuten clave de referencias bibliograacutefi cas y recursos disponibles en internet

Fortuny 7 28010 MadridT 91 121 09 2o F 91 121 09 31biodiversidadfundacion-biodiversidadeswwwfundacion-biodiversidades

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Los editores de este libro auacutenan experiencias profesionales complementarias incluso contrastadas ya que mientras tres de ellos provienen del aacutembito acadeacutemico los otros dos realizan su trabajo en el seno de empresas privadas Los cinco comparten el intereacutes por el impacto de las infraestructuras lineales sobre el medio natural y llevan muchos antildeos recopilando informacioacuten y participando en diversos proyectos con el fi n de comprender mejor estos impactos y como atenuarlos Las ideas teoacutericas desde el campo de la ecologiacutea que Fernando Valladares Luis Balaguer y Adriaacuten Escudero han ido destilando como resultado de su investigacioacuten han debido combinarse por un lado con el conocimiento de la realidad a pie de obra que Valentiacuten Alfaya ha acumulado durante el seguimiento de numerosos proyectos de construccioacuten y por otro con la experiencia de Ignacio Mola quien auacutena ambos intereses cientiacutefi cos y de empresa como coordinador de proyectos en restauracioacuten de I+D+i en el aacutembito de la construccioacuten y explotacioacuten de infraestructuras La necesidad de combinar visiones y experiencias les ha llevado a colaborar con frecuencia y el resultado de ese cruce feacutertil entre la ciencia y la teacutecnica entre el mundo de las ideas y el marco tozudo de una realidad compleja es lo que ha dado origen a este libro

Restauracioacuten ecoloacutegica de aacutereas afectadas

por infraestructuras de transporte

Bases cientiacutefi cas para soluciones teacutecnicas

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