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Page 1: Respuesta

Cartas al Editor / Med Clin (Barc). 2012;139(15):694–697 697

Financiacion

Este trabajo conto con una ayuda de la Catedra UAM-Novartisde Medicina de Familia y Atencion Primaria de la UniversidadAutonoma de Madrid.

Bibliografıa

1. Garcıa-Bragado Dalmau F. La medicina actual ante los anticoagulantes de nuevageneracion. Med Clin (Barc). 2012;138:438–40.

2. Sawicki PT. A structured teaching and self-management program for patientsreceiving oral anticoagulation: a randomized controlled trial. Working Group forthe Study of Patient Self-Management of Oral Anticoagulation. JAMA.1999;281:145–50.

3. Sanchez R, Yanes M, Cabrera A, Ferrer JM, Alvarez R, Barrera E. Adaptaciontranscultural de un cuestionario para medir la calidad de vida de los pacientescon anticoagulacion oral. Aten Primaria. 2004;34:353–9.

Vease contenido relacionado en DOI: http://dx.doi.org/10.1016/j.medcli.2011.12.003

Vease contenido relacionado en DOI: http://dx.doi.org/10.1016/j.medcli.2012.05.006

Esteban Gonzalez Lopeza,*, Patricia Gonzalez-Riosb,Angel Otero-Puimec y Elena Ramos-Quirosd

aUnidad de Medicina de Familia. Departamento de Medicina,

Universidad Autonoma de Madrid. Centro de Salud Universitario

Villanueva de la Canada, Madrid, EspanabHospital Universitario del Nino Jesus, Universidad Autonoma de

Madrid, Madrid, EspanacDepartamento de Medicina Preventiva, Salud Publica y Microbiologıa,

Facultad de Medicina, Universidad Autonoma de Madrid, Madrid,

EspanadCentro de Salud Universitario Villanueva de la Canada, Universidad

Alfonso X el Sabio, Villanueva de la Canada, Madrid, Espana

* Autor para correspondencia.Correo electronico: [email protected] (E. Gonzalez Lopez).

http://dx.doi.org/10.1016/j.medcli.2012.05.006

Respuesta

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Sr. Editor:

No pretendıa en mi editorial dar a entender que la irrupcion delos nuevos anticoagulantes orales (NACO) tuviera que significar ladesaparicion de los «clasicos». Sin embargo, sı que creo que en losproximos anos los NACO iran sustituyendo de forma progresiva ylenta a los antivitaminas K (AVK), sin que esto suponga ladesaparicion de estos, de forma similar a lo que ocurrio con lairrupcion de las heparinas de bajo peso molecular (HBPM) conrelacion a la heparina no fraccionada. Los que vivimos esemomento recordaremos que algunos de los argumentos utilizadosen contra de las HBPM son los mismos que los utilizados hoy paralos NACO; no se podıan monitorizar, no habıa antıdoto y eran mascaras.

Coincido con los autores en que los controles de INR son unrefuerzo para la adherencia al tratamiento y hay un acuerdounanime en que los pacientes no cumplidores no son candidatos aser tratados con los NACO. No creo que la calidad de vida percibidapor los pacientes medida con el instrumento utilizado por losautores vaya a ser un factor determinante para la sustitucion de losAVK por los NACO, si bien, en mi experiencia personal sonnumerosos los enfermos que verbalizan su incomodidad por loscontroles y preguntan por los NACO.

Personalmente creo que los factores determinantes para suprogresiva sustitucion van a ser la seguridad y la eficacia.Seguidamente expondre algunos datos sobre los que se sustentami opinion: Connolly et al.1 demostraron que cuando el tiempo enrango terapeutico (TRT) del INR era inferior al 65% la eficacia de losAVK era similar a la de la doble antiagregacion. Van Walravenet al.2, en una revision sistematica de 67 estudios con un total de50.208 pacientes seguidos durante 57,154 pacientes/ano, com-probaron que el TRT era del 63% de media, del 66,4% en los ensayosclınicos controlados, del 65,6% en las clınicas de anticoagulacion ydel 56,7% en la comunidad. Oake et al.3, en un metaanalisis con

71.065 pacientes, comprobo que el 44% de las hemorragiassucedieron con un INR > 3, mientras que el 48% de los episodiostromboembolicos sucedieron con un INR < 2. Oden et al.4 estu-diaron la relacion entre 1.250.000 determinaciones de INR y lamortalidad en 42.451 pacientes, y comprobaron que la probabi-lidad de mortalidad se incremento 2,2 veces por cada unidad porencima de un INR de 2,5. Finalmente, todos los nuevos anti-coagulantes han mostrado en sus estudios pivotales5–7 unas tasasde hemorragias intracraneales significativamente inferiores encomparacion con warfarina, con el consiguiente impacto sobre lamorbimortalidad8.

No quisiera finalizar esta Carta al Editor sin felicitar a los autorespor la calidad percibida por los pacientes a su cargo debido a laatencion recibida.

Bibliografıa

1. Connolly S, Pogue J, Eikelboom J, Flaker G, Commerford P, Franzosi MG, et al.Benefit of oral anticoagulant over antiplatelet therapy in atrial fibrillationdepends on the quality on international normalized ratio control achieved bycenters and countries as measured by time in therapeutic range. Circulation.2008;118:2029–37.

2. Van Walraven C, Jennigs A, Oake N, Fergusson D, Forster AJ. Effect of study settingon anticoagulation control: a systematic review and metaregression. Chest.2006;129:1155–66.

3. Oake N, Fergusson DA, Forster AJ, van Walraven C. Frequency of adverse events inpatients with poor anticoagulation: a meta-analysis. CMAJ. 2007;176:1589–94.

4. Oden A, Fahlen M. Oral anticoagulation and risk of death: a medical recordlinkage study. BMJ. 2002;325:1073–5.

5. Connolly S, Ezekowitz MD, Yusuf S, Eikelboom J, Oldgren J, Parekh A, et al.Dabigatran versus warfarin in patients with atrial fibrillation. N Engl J Med.2009;361:1139–51.

6. Patel MR, Mahaffey KW, Garg J, Pan G, Singer DE, Hacke W, et al. Rivaroxabanversus warfarin in nonvalvular atrial fibrillation. N Engl J Med. 2011;365:883–91.

7. Granger CB, Alexander JH, McMurray JJ, Lopes RD, Hylek EM, Hanna M, et al.;ARISTOTLE Committees and Investigators. Apixaban versus warfarin in patientswith atrial fibrillation. N Engl J Med. 2011;365:981–92.

8. Fang MC, Go AS, Chang Y, Hylek EM, Henault LE, Jensvold NG, et al. Death anddisability from warfarin-associated intracranial and extracranial hemorrhages.Am J Med. 2007;120:700–5.

Ferran Garcıa-Bragado Dalmau

Hospital Universitario de Girona Dr. Josep Trueta, Girona, Espana

Correo electronico: [email protected]

http://dx.doi.org/10.1016/j.medcli.2012.06.002