ALERTA CIUDADANAOctubre 2020

El Congreso Nacional ha retomado eldebate sobre la reforma electoral y,otra vez, se abren las expectativas ciu-

dadanas en torno a lo que se apruebe y a laresponsabilidad de los partidos políticos ahírepresentados para anticiparse a lo quepodría ser una nueva y mucho más grave cri-sis político-social derivada de la falta de credi-bilidad en el proceso electoral, desconfianzaen sus conductores y cuestionamiento de susresultados. Y no es para menos. La imagendel país resultó gravemente dañada por todaslas irregularidades del proceso electoral ante-rior, el indebido manejo electrónico del conteode votos y la forma dudosa en que se legitima-ron resultados cuestionables, tanto por obser-vadores nacionales como extranjeros, dentroy fuera del país.

Con las elecciones de 2017 se profundizó lafractura social que se abrió con el golpe deEstado de 2009, se intensificó la polarizaciónpolítica y se terminó de resquebrajar la con-fianza ciudadana en la institucionalidad delEstado. De entonces para acá el descrei-miento ciudadano ha ido en aumento, de lamano del desencanto y de la sensación de

abandono e indefensión, provocados por elabuso de los que controlan el poder y manipu-lan las instituciones del país.

Nuevamente estamos en la ruta de las elec-ciones y el año 2021, año del 200 aniversariode la independencia patria, nos espera conelecciones primarias e internas (marzo,2021), que pondrán a prueba a los partidospolíticos y su vocación democrática o autori-taria ante la proliferación de movimientos,corrientes y carreras en solitario, todos elloscon la certeza, la ilusión o el cálculo político deque cuentan con la simpatía y el apoyo masi-vo de los electores. Pero el año 2021 nos trae-rá también las elecciones generales (noviem-bre, 2021), en las que se pondrá a pruebatodo el sistema político-electoral; su respues-ta ante la demanda ciudadana de transparen-cia; su grado de respeto hacia la voluntadmayoritaria del electorado hondureño; su tra-dicional negociación a puertas cerradas encuanto al total de electores, la diferencia cuan-titativa entre el que gana y los que no ganan; yla forma en que se reparten diputaciones yalcaldías que no reflejan la voluntad del votociudadano.

El contexto en el que se debaten lasreformas electorales es sumamentecrítico para la legitimidad de los parti-

dos políticos, que no terminan de superar lacrisis de representación y credibilidad quepadecen, sobre todo en el Congreso Nacio-nal, en donde se tomarán esas medidas. Vere-mos si los partidos ahí representados soncapaces de tomar las mejores decisiones,congruentes con los principios básicos de lademocracia: ¡Que gane el que saque más

votos, el que sea electo por la mayoría y elque salga triunfador, sin la menor duda de quelo ha logrado sin fraude ni arreglos bajo lamesa!

Negociación, acuerdo y debate parecen serlas palabras clave para entender lo que se vaa aprobar en el Congreso, pero, por encimade ellas, está el nivel de compromiso políticocon la democracia, su capacidad para preve-nir otra crisis largamente anunciada y su dis-

EL PROBLEMA

EL CONTEXTO

Reforma electoral, prevención de crisis y responsabilidad política

LAS IMPLICACIONES

ALERTA CIUDADANA

El CEDOH retoma una iniciativa impulsada en 2006 como un proceso deconcientización e incidencia sobre diversos temas de interés nacional.

El propósito de este sistema de alerta es informar a la ciudadanía, a losdiputados del Congreso Nacional, a los funcionarios y empleados del poderEjecutivo y del poder Judicial, sobre temas sensibles cuyo desconocimientopuede inducir a una toma de decisiones equivocada, provocando un serioretroceso en el proceso de construcción democrática que vive nuestro país.

Con lo que se decida ahora en el Con-greso, estará marcada la suerte de laestabilidad política y social del país, no

solo de cara a las elecciones de 2021 sino algobierno que asumirá para el período 2022-2026. De ello dependerá que la conflictividadelectoral que se percibe desde ahora en elambiente, evolucione a crisis perturbadora elpróximo año y a crisis político social profundae intensa en el siguiente gobierno.

La situación se vuelve más complicada por-que en 2021, y en los años sucesivos, se sen-tirá con mayor intensidad el impacto de la pan-demia y las consecuencias de la corrupción,impunidad y narcotráfico que azota al espec-

tro político del país y que lo descalifica paratomar las mejores decisiones en beneficio delinterés general de la sociedad.

Si la reforma no se produce o se produce amedias, desde ahora podemos anticipar laintensificación del desencanto, la frustración,el descreimiento y la sensación de indefen-sión por parte de la ciudadanía. Y esto es así,cuando se pierde el encanto y la fascinaciónpor la política, sus partidos y sus líderes; cuan-do la gente siente que se cierran todas lassalidas y se pierde toda la esperanza de tenerun país diferente, mejor y consecuente con loque se necesita.

Más allá de las preferencias político-partidarias de quienes vivimos eneste país y de las inclinaciones pro-

gresistas o conservadoras de quienes contro-lan los partidos políticos, la preocupación porel país y por nuestro futuro deben ser centra-les en el debate por la reforma electoral. Lacapacidad de influencia de los sectores tradi-cionales y conservadores dentro de los parti-dos políticos debe ser desplazada y neutrali-

zada por los sectores modernizantes y pro-gresistas, que seguramente existen al interiorde todos los partidos que conforman el espec-tro político del país. De ahí la importancia deestar alerta a lo que sucederá en el CongresoNacional y concitar esfuerzos para incidir,fuerza para presionar, habilidad para nego-ciar y visión para anticiparse a lo que puedevenir en el futuro cercano.

posición a recuperar la legitimidad perdidaante la ciudadanía.

Preocupa enormemente que quienes van adecidir sobre la reforma electoral sean, en sumayoría, aspirantes a reelegirse una y otravez, y, por ello, puedan perder objetividad almomento de tomar sus decisiones. Son dipu-tados que fueron nominados y electos conreglas del juego obsoletas y que han logradoinsertarse en los entretelones del poder delque han salido gananciosos. De ahí que surja

la duda de si ellos serán capaces de impulsaruna reforma que, si se produce con los alcan-ces que se plantean desde la sociedad, termi-narán afectando sus intereses políticos inme-diatos. A lo anterior se suma el abrumadornúmero de alcaldes que aspiran a su reelec-ción y que constituyen la base política munici-pal de los diferentes partidos representadosen el Congreso, con lo que se vuelve másincierto el futuro inmediato de la reforma delsistema político-electoral.

...CONTINÚA