Recursos naturales, Ideología y crecimiento económico

CÓDIGO: 7051

Resumen

La literatura económica ha identificado cuatro canales de transmisión mediante los cuales la

abundancia de recursos naturales puede afectar negativamente el crecimiento económico. En la

presente investigación sugerimos un quinto canal de transmisión. Nuestros resultados muestran

que dependiendo del tipo de recurso natural que una sociedad posea en abundancia, se pueden

identificar dos efectos sobre el crecimiento: el primero es un efecto directo por medio del

incremento en la productividad, mientras que el segundo un efecto indirecto a través de la

ideología de los agentes económicos y sus preferencias de política.

JEL classification: 43, P16, Q0, O13

Keywords: Economic Growth, Property rights, Natural Resources

2

I. Introducción

Desde la investigación seminal de Sachs y Warner (1995) acerca de la relación inversa

entre la abundancia de recursos naturales y crecimiento, la literatura económica ha logrado

identificar al menos cuatro canales de transmisión (Gylfason, 2001) de lo que se conoce como la

maldición de los recursos naturales. La presente investigación tiene como objetivo proponer un

quinto canal de transmisión a través de la ideología. Sugerimos que el tipo de recurso natural que

una sociedad posee en abundancia puede influenciar sobre la orientación política e ideológica de

las sociedades, y podría por tanto, tener repercusiones en su desempeño económico. Boschini et

al. (2007) ya han mostrado evidencia que ciertos tipos de recursos naturales son más propensos

que otros a mejorar el desempeño económico si, y solo si, existen instituciones fuertes. “Dado un

buen marco constitucional, los diamantes o el petróleo tienen el potencial de aumentar el

desarrollo económico de un país, mientras que los mismos recursos llevarían a problemas a un

país con instituciones deficientes.” (pp. 4). Nuestro enfoque se asemeja al de Boschini et al. (op

cit.) en cuanto a que la maldición de los recursos naturales depende del tipo de recurso natural,

sin embargo, nuestro objetivo es demostrar que el canal de transmisión por el cual la abundancia

de un tipo de recurso natural afecta el crecimiento económico es la ideología y las preferencias

de políticas.

Desde el punto de vista teórico, este trabajo se fundamenta en tres pilares: El primero de

ellos es la maldición de los recursos naturales, que como se dijo anteriormente no es otra cosa

que el efecto negativo que sobre el crecimiento económico ejerce la abundancia de recursos

naturales. El segundo pilar es la relación entre ideología y crecimiento económico, un área que

aún se encuentra en su etapa inicial de desarrollo. El tercer y último pilar es el concepto del bien

limitado. Los dos primeros son bastante conocidos, y la mayoría de los economistas están

3

familiarizados –en mayor o menor grado- con ellos, mientras que el último es una definición

proveniente de la antropología, la cual desarrollaremos más adelante.

Para determinar empíricamente el efecto que los recursos naturales ejercen sobre la

ideología, es necesario contar con unidades geográficas diferenciadas en el tipo de recurso

natural que poseen, pero manteniendo lo más homogéneas posibles las otras áreas. Esto nos

permite no desviar la atención a otros factores que podrían tener influencia sobre el crecimiento

económico. En este sentido en vez de hacer un análisis de corte transversal con países en los que

los sistemas constitucionales, legales y de derechos de propiedad varían de país a país, hemos

decidido hacer el análisis en un país con gobierno unitario, de forma tal que todas las regiones

(estados, departamentos, provincias) gozan de un mismo sistema monetario, jurídico,

constitucional y legal; lo cual, no necesariamente implica que sus instituciones formales e

informales sean idénticas. Por estas razones hemos elegido Bolivia, cuyas regiones (léase

departamentos) tienen recursos naturales claramente diferenciados1, y ofrece por tanto una

oportunidad inmejorable de estudio.

Con el concepto de bien limitado como punto de partida para nuestro análisis, nuestro

objetivo principal es determinar el efecto que la abundancia de un determinado tipo de recurso

natural ejerce sobre las preferencias de políticas de los agentes económicos. Este efecto sobre las

preferencias de política sería el resultado de un determinado tipo de orientación cognoscitiva de

las sociedades –y por tanto de los individuos– que están expuestas a la abundancia de un

determinado tipo de recurso natural. Nuestro segundo objetivo es evaluar el efecto que la

abundancia de un determinado tipo de recurso natural -mediante su influencia en las preferencias

de política- ejerce sobre el crecimiento económico.

1 Los departamentos del sur y del oeste son abundante en recursos naturales extractivos. Mientras que los del norte y este tienen abundante tierra fértil para la agricultura y pasto para la ganadería.

4

Finalmente, es necesario señalar que Acemoglu y Robinson (2012) en su brillante ensayo

para explicar el fracaso económico de algunas naciones -y el éxito de otras-, hacen uso del

término “Instituciones Económicas Extractivas”2 para referirse a aquellos países en los que la

falta de ley y orden, la inexistencia de derechos de propiedad, las excesivas barreras y

regulaciones al funcionamiento del mercado, la coerción laboral y los estados autoritarios débiles

son la norma. Aquellos países –dicen los autores- con estas instituciones tenderán al fracaso. En

esta investigación sostenemos que las características esenciales de las “Instituciones Económicas

Extractivas” están presentes en mayor cuantía en sociedades con recursos extractivos, que en

aquellas con recursos agrícolas-ganaderos.

En la siguiente sección hacemos una descripción de nuestro marco teórico así como de la

literatura existente en cuanto a la maldición de los recursos naturales. El apartado III presenta los

datos y el modelo. La sección IV analiza los resultados y la V concluye.

II. Marco teórico y revisión de la literatura

a) La imagen del bien limitado

Para entender completamente la idea del bien limitado, creemos importante familiarizarnos

con el significado de la orientación cognoscitiva, la misma que puede ser entendida como la

expresión no verbalizada de las “reglas de juego” impuestas por el ambiente social, económico y

natural. Es decir, se puede entender a la orientación cognoscitiva, como una forma de ver e

interpretar el mundo. Foster (1965) basándose en la observación y recolección de datos de

comunidades campesinas en México acuñó el término “Imagen del bien limitado” como un tipo

de orientación cognoscitiva en particular, el cual consiste en una visión del mundo en la que

2 Los autores definen instituciones de forma amplia como las reglas que gobiernan el comportamiento económico y

político.

5

“todas las cosas deseadas en la vida como tierra, riqueza, salud, amistad y amor, hombría y

honor, respeto y estatus, poder e influencia, seguridad, etc., existen en cantidades finitas y

además son escasas… adicionalmente no existe un modo directo de incrementar las cantidades

disponibles” El autor va aún más allá al afirmar que “… por lo tanto se infiere que un individuo

o una familia puede mejorar su posición solamente a expensas de otros.”3

Ahora bien, es de suponer que una sociedad predominantemente minera tendrá una

orientación cognoscitiva diferente a una sociedad predominantemente agrícola y ganadera, ya

que el ambiente económico, social y natural es distinto en ambas sociedades. Inicialmente se

podría pensar que la “Imagen del Bien Limitado” estaría presente en ambos escenarios, dado que

tanto las minas como la cantidad cultivable de tierra -o de pasto para el ganado- son limitadas, lo

que significa que la porción de tierra –o la veta de mina- ocupada por alguien, no puede ser

ocupada por alguien más. Sin embargo existe una diferencia importante entre ambas sociedades,

y está referida al producto que se obtiene tanto de la mina como de la tierra. Específicamente, el

mineral existente en las minas es una cantidad finita, por lo que, parafraseando a Foster (1965)

“un individuo puede mejorar su posición solamente a expensas de otros” ya que el mineral

extraído por una persona no puede ser extraído por nadie más, pero además, esta acción

disminuye la cantidad total de mineral disponible para el resto de la sociedad. Esta situación no

se da en sociedades con abundante tierra fértil, en las que el producto se puede reproducir

periodo tras periodo. Como consecuencia, la orientación cognoscitiva de las sociedades

predominantemente mineras tenderá a estar más próxima a la “Imagen del Bien Limitado” en las

que –como se mencionó antes- todas las cosas se encuentran en cantidades finitas y son escasas,

3 Traducción propia.

6

esto a su vez los podría llevar a pensar que “la ganancia de unos supone el daño de otros”

situación a la cual Mises denominó “dogma Montaigne”.

Foster (op cit.) señala que “la imagen del bien limitado” implica que las sociedades pueden

reaccionar de dos formas: cooperación extrema y algunas veces comunismo o individualismo

extremo. Elegirán el primero si existe liderazgo dentro de la sociedad o si éste es impuesto desde

afuera. Dado que las sociedades tienen que elegir autoridades, sean estas locales (alcaldes y

gobernadores), o nacionales (diputados, senadores presidente), lo más probable es que estas

sociedades reaccionen con cooperación o comunismo.

b) La maldición de los recursos naturales

La relación entre recursos naturales y crecimiento económico ha sido objeto de muchos

estudios no solo por la motivación económica natural basada en el desempeño del crecimiento,

sino también a causa de la relación intrigante y contra intuitiva que estas dos dimensiones

presentan. Instintivamente, mientras más recursos tenga un país, más y mejor debería ser su

rendimiento económico, pero en lugar de eso, aquellos países que tienen recursos naturales

abundantes tienden a crecer más lentamente como ha sido probado empíricamente –entre otros-

por los trabajos de Gelb (1988), Sachs y Warner (1997) y Gylfason (2001).

Gelb (1988) estudia la relación entre recursos naturales y crecimiento económico usando

como muestra seis países petroleros4. Las conclusiones son compatibles con las teorías que

relacionan el lento crecimiento económico con la abundancia de recursos naturales, situación que

es causada por la mala asignación de las ganancias de estas actividades y la baja productividad

en estas economías; enfatizando el rol que el gobierno y las políticas tienen en este resultado. Por

4 Los países analizados durante el periodo 1974-1981 son Argelia, Ecuador, Indonesia, Nigeria, Trinidad y Tobago y Venezuela. El autor excluye los grandes productores árabes debido a la falta de datos y/o significancia.

7

otro lado, Sachs y Warner (1997) demuestran que aquellos países que en la década del 1970

tuvieron una proporción alta de exportaciones de recursos naturales con respecto al producto

interno bruto (PIB) tendieron a experimentar tasas de crecimiento más lentas durante los

siguientes 20 años. Sachs y Rodriguez (1999) desarrollan una explicación del pobre desempeño

de las económicas ricas en recursos naturales usando Venezuela como su país de análisis. Los

autores demuestran que países ricos en recursos naturales que invierten sus ganancias

localmente, mantienen el nivel de consumo alto gracias a los elevados niveles de ingresos

experimentado durante la temporada de expansión de sus exportaciones, por lo tanto, ajustando

su realidad por encima de su estado estacionario de equilibrio. Una vez que la tasa de

crecimiento de la industria intensiva en recursos naturales es menor a las otras industrias, estos

países tienden a experimentar bajo crecimiento. Por lo tanto en el largo plazo convergen

nuevamente a su estado estacionario.

Las teorías que explican esta relación negativa son diversas. En este sentido, Gylfason

(2001) divide su análisis en cuatro canales de transmisión que pueden explicar la relación

negativa entre abundancia de recursos naturales y crecimiento económico. El primero de estos

cuatro canales de transmisión propuestos es la enfermedad holandesa, el cual resulta del menor

comercio e inversión extranjera debido a la apreciación de la moneda. El segundo canal enfatiza

que a mayor cantidad de recursos naturales, habrá mayor corrupción debido a instituciones

ineficientes. El tercer canal es el efecto negativo que la abundancia de recursos naturales tiene

sobre la educación y el nivel de capital humano. El cuarto y último canal propuesto es que habría

menor inversión doméstica y de menor calidad.5 Sin embargo Gylfason (op. cit) concluye que a

5 En este último punto Gylfason se refiere a la inversión pública no productiva, los llamados “elefantes blancos”, que no sería un problema para países que, gracias a la generosidad de la naturaleza experimentan grandes ingresos.

8

pesar que la abundancia de recursos naturales parece ser la razón de este impacto negativo en el

crecimiento, no puede decirse que esta es una verdad absoluta; resaltando como un contra-

ejemplo el caso de Noruega.

Van der Ploeg (2011) enfatiza esta última conclusión enunciando que la maldición no es

inevitable. Advierte, que no solamente Noruega, sino Botsuana fueron capaces de desarrollarse y

tener tasas de crecimiento positivas durante años, lo que significa que existen otros factores que

pudieron influenciar su desempeño. En estos y otros casos mencionados por Ploeg, las políticas y

estrategias de gobierno son la razón principal para esta ruta del éxito (o fracaso). Por ello basa su

análisis en como el efecto de los recursos naturales sobre el crecimiento puede verse afectado por

la calidad institucional. Wright (2001) complementa este punto diciendo que “la industrialización

americana fue construida sobre la base de los recursos naturales”. Mehlun et al. (2006) asumen

que los resultados de la explotación de los recursos naturales dependerá en como sean

distribuidas sus rentas, así como de las características institucionales. Sus resultados muestran

que las instituciones que son “amistosas con los productores” permiten al país disfrutar de

crecimiento económico basado en la utilización apropiada de sus recursos naturales.

En general se observa que las diferentes teorías que intentan explicar la relación inversa

entre crecimiento y abundancia de recursos naturales se centran en la fortaleza institucional, las

políticas públicas de redistribución del ingreso, o el efecto que se produce sobre ciertas variables

macroeconómicas (inversión, tipo de cambio, precios, etc.). Sin embargo hasta donde pudimos

comprobar, no existe una explicación que sugiera la ideología como posible canal de

transmisión. Esto es pues, lo que pretendemos hacer en las siguientes secciones.

III. Datos y modelo

a) Datos

9

Para evaluar empíricamente el efecto que la abundancia relativa de un recurso natural

ejerce sobre la ideología, se recopilaron datos departamentales sobre el Producto Interno Bruto a

precios constantes (PIB) desagregado por actividad económica6. El Instituto Nacional de

Estadísticas de Bolivia divide el PIB en once categorías, las cuales a su vez pueden estar

divididas en sub-categorías. Las categorías que usamos fueron las referidas a Agricultura,

Extractivos y Servicios de la Administración Pública. También usamos datos sobre el nivel de

escolaridad así como un índice de pobreza departamental.7

Para la construcción del índice de ideología se usó una metodología similar a la empleada

por Pickering y Rockey (2011). Durante cada año eleccionario se determinó la orientación

ideológica de cada departamento mediante los siguientes tres pasos. El primer paso consiste en

asignar una ponderación cuyo rango se encuentra entre -1 y 1 dependiendo de la orientación

económica de los partidos políticos mediante el estudio de sus propuestas electorales, programas

de gobierno, manifiestos o estatutos. De esta suerte, un frente de izquierda tendría una

ponderación de -1 mientras que uno de derecha tendría una ponderación de 1, entendiendo como

frente de izquierda a un partido con fuerte orientación estatal mientras que uno de derecha

tendría una ideología de laissez-faire. A los partidos de centro-izquierda se les asignó -0.5

mientras que a los de centro-derecha 0.5. El segundo paso consiste en multiplicar el porcentaje

de votos obtenidos por cada representación política en cada departamento por su respectiva

ponderación (la cual fue obtenida en el primer paso). Finalmente para cada departamento se

suma el producto obtenido en el paso anterior. El resultado final de la sumatoria se encuentra

6 Las actividades económicas en las cuales está dividido el PIB son: Agricultura, silvicultura, caza y pesca; Extracción de minas y canteras; Industrias manufactureras; Electricidad, gas y agua; Construcción; Comercio, Transporte, Almacenamiento y Comunicaciones; Establecimientos Financieros, Servicios sociales y domésticos, Restaurantes y hoteles y Servicios de la Administración Publica. 7 Estos datos fueron obtenidos de UDAPE.

10

entre -100 si es que todos los habitantes de un determinado departamento votaron por partidos de

izquierda, o 100 si es que todos los habitantes votaron por partidos de derecha. Por su puesto que

dentro de este espectro existen infinitas posibilidades.

En el análisis de regresión que se presenta más adelante se transformó el índice en una

variable ordenada del siguiente modo:

50índice4

0índice50si3

50-índice0si2

índice50-si1

*

si

Y

De esta forma a medida que la variable *Y aumenta, la preferencia de los habitantes de

la región se vuelve más de derecha y viceversa. La transformación de la variable dependiente en

una variable de orden nos permite estimar nuestros resultados mediante mínimos cuadrados

ordinarios (modelo lineal de probabilidad) o mediante el uso de modelos logit ordenados.

Hay que resaltar que desde el año 1985, Bolivia ha vivido elecciones a nivel nacional

cada dos años. Los años 1985, 1989, 1993, 1997, 2002, 2005 y 2009 hubo elecciones a nivel

nacional para elegir Presidente y representantes al parlamento. Los años 1987, 1991, 1995, 1999,

2004 y 2010 hubo elecciones para elegir alcaldes. El año 2006 hubo elección para la asamblea

constituyente y finalmente el año 2010 hubo elección de gobernadores de departamento (además

de alcaldes). Esta situación nos permite establecer un índice de preferencia del votante promedio

cada dos años empezando desde 1989, con la excepción del año 2001, 2003 y 2011 en cuyo lugar

usaremos datos de los años 2002, 2004 y 2010. Los datos usados corresponden al periodo 1989-

2011.

b) Modelo econométrico

11

Para determinar si las preferencias de los votantes dependen del tipo de recurso natural se

lleva adelante la siguiente regresión:

tititititi PPUPEXPAGY ,,3,2,10

*

, (1)

Donde *Y representa el índice mencionado anteriormente, tiPAG , es la contribución

porcentual del sector agrícola al PIB para el departamento i en el periodo t, tiPEX , es la

contribución porcentual del sector extractivo al PIB para el departamento i en el periodo t y

tiPPU , es la contribución del gasto público al PIB. Nótese que esta es una regresión de datos de

panel. Econométricamente se puede encontrar los valores de los parámetros en (1) mediante

mínimos cuadrados ordinarios lo que se conoce como modelo lineal de probabilidad, o

alternativamente mediante el supuesto que los errores siguen una distribución logística y el uso

de estimadores de máxima verosimilitud usar el modelo ordinal logit. En la presente

investigación hemos estimado la ecuación (1) de ambas formas como análisis de cuán robustos

son nuestros resultados, esto a pesar de las limitaciones que los modelos de probabilidad lineal

presentan.

Adicionalmente se estimaron otros dos modelos econométricos complementarios al

presentado anteriormente. En la primera variante se desglosa el sector extractivo en dos partes:

minería y petróleo. En la segunda variante se usa la razón Agricultura/Extractivos como variable

independiente. Los dos modelos complementarios pueden ser expresados de la siguiente forma:

titititititi PPUPPEPMIPAGY ,,4,3,2,10

*

, (2)

tititititi PPUPEXEXAGY ,,3,2,10

*

, )/( (3)

12

Donde tiPMI , y tiPPE , son la contribución porcentual del sector minero y petrolero al

PIB para el departamento i en el periodo t. AG/EX representa la razón del sector agricultura con

respecto al sector extractivo. Si el coeficiente referido a agricultura es positivo entonces habría

evidencia que las sociedades agrícolas y ganaderas tendrían a elegir políticas de derecha. De la

misma manera si el coeficiente relacionado con el sector extractivo es negativo, entonces las

sociedades mineras mostrarían tendencia a preferir políticas de izquierda y viceversa. Con

respecto al gasto público, se espera que las sociedades que se benefician con mayor gasto publico

tiendan a preferir políticas que prioricen el gasto público, por lo tanto tenderían a votar por

autoridades de tendencia izquierdista, por lo que se espera que el signo sea negativo.

Para la segunda parte de este trabajo, o sea, para determinar el impacto que la ideología

tiene sobre el crecimiento económico, se usó como referencia el modelo de Bjørnskov (2005)

quien sugiere que el esfuerzo que los individuos ponen en sus actividades es la clave del éxito.

Con este razonamiento es fácil enlazar la ideología política individual con el desempeño

económico de un país, donde aquellos que creen en el supuesto del mérito pondrán más esfuerzo

en sus actividades periodo tras periodo y por lo tanto tendrán una contribución mayor en la

productividad. Para evitar a los polizones (oportunistas parásitos) los votantes eligen gobiernos

que protegerán sus intereses y sus derechos a apropiarse del fruto de su propio esfuerzo. Esto es

probado empíricamente por el autor quien muestra que la ideología política de derecha

contribuye positivamente al crecimiento económico. Basado en el principio de la teoría

presentada por Bjørnskov, el objetico de esta investigación es añadir una nueva interpretación a

la maldición de los recursos naturales usando la conexión entre la ideología política y el

desempeño económico.

13

El modelo que usaremos es similar al de Bjørnskov (2005) en el que se asume que los

individuos viven y trabajan en dos periodos y están interesados en maximizar su consumo y ocio.

Durante el primer periodo hay un salario 1w que depende del esfuerzo que pongan los individuos

en dicho periodo 1e . El salario en el segundo periodo también depende del esfuerzo en el primer

periodo a través de la función acumulativa de aprendizaje a . La productividad depende del

esfuerzo total e de la población n pero con ponderaciones desconocidas para cada individuo

como se muestra en la ecuación (4), por tanto los individuos no conocen la forma en que su

esfuerzo será recompensado en el futuro, por lo que es necesario tomar expectativas sobre la

ponderación, lo cual se denota como Ep . Para simplificar, no hay ahorro, por lo que todo el

ingreso del salario es consumido. Los individuos por tanto maximizaran su utilidad dependiendo

del consumo y ocio que quieran elegir. Las ecuaciones (5) y (6) muestran las formas funcionales

para el salario y la utilidad de cada individuo. La ecuación (7) representa la función para la curva

de aprendizaje.

n

j

jj epe1

(4)

iii eeaw )( 1 (5)

iii lcU lnln (6)

Asumiendo que 00 e y ii el 1 se obtiene los resultados en la ecuación (7) donde claramente

se observa que el esfuerzo depende positivamente de Ep por lo que a mayor esfuerzo habría

mayor ganancias en el futuro y consecuentemente a un aumento de la productividad8.

8 La derivación completa se encuentra en el anexo al final.

14

E

E

bpe

bpe

21

12

2

1

(7)

Según Bjørnskov (op cit.) dado que todos los individuos contribuyen con su esfuerzo al

conocimiento común, existe el incentivo para que los polizones se apropien del esfuerzo de otros,

por lo que, para evitar esto, los individuos tienen un incentivo para votar por aquellas políticas

que provean una protección óptima a apropiarse de las ganancias de sus propios esfuerzos, es

decir, votaran por aquellos partidos o candidatos que prometan un sistema legal y de derechos de

propiedad sólidos. Existen pues dos motivos para pensar que las sociedades de derecha serán

más productivas. El primero es el efecto directo que viene dado por el esfuerzo extra de los

individuos, mientras que el segundo es un efecto indirecto por medio del voto y selección de

políticas que garanticen los derechos de propiedad y por tanto que su esfuerzo se vea

recompensado.

Nuestros supuestos se asemejan a los de Bjørnskov (op cit.), pero añadiremos que las

sociedades mineras tienden a ser menos productivas que las agrícolas porque una vez que la veta

ha sido explotada y el mineral extraído, ésta tiene muy poco valor residual, por lo que no existe

el incentivo de ser productivos ya que la tecnología y el conocimiento adquirido no puede ser

traspasado a las siguientes generaciones para la explotación de esa misma veta. Adicionalmente

no existen derechos de propiedad sobre las minas, ya que la mayor parte de estas se basan en

concesiones que otorga el estado para su explotación. Mientras que, por otro lado, los predios

agrícolas respaldados por derechos propietarios permiten al dueño traspasar la propiedad a las

futuras generaciones, por lo que existe el incentivo de elevar la productividad dado que el

conocimiento y tecnología será traspasado a los herederos. Existe también un efecto indirecto

que se da por medio de la ideología y la elección de políticas. Como se explicó anteriormente, las

15

sociedades mineras tenderán a ser de izquierda (dada la Imagen del Bien Limitado) mientras que

las sociedades agrícolas y ganaderas tenderán a votar por políticas que garanticen el derecho de

propiedad sobre la tierra.

Finalmente para comprobar el efecto que la ideología ejerce sobre el crecimiento económico,

se usa un modelo similar al empleado por Barro y Sala-i-Martin (1992) quienes mediante el uso

de mínimos cuadrados no lineales estimaron el valor de en la siguiente regresión:

Tttiti

T

ti

Ttiy

T

e

y

y

T

000

0

0

,,,

,

,ln

1ln

1

(8)

donde tiy , representa el logaritmo del PIB per cápita real del estado i en el periodo t.

Reparametrizando la anterior ecuación y expresándola de forma autoregresiva, se obtiene:

1,,,1, lnln ttititi yy

(9)

donde Te . Dado el rezago de la variable dependiente en la parte derecha de la ecuación (9),

el uso de mínimos cuadrados ordinarios daría resultados inconsistentes; por tal motivo se usa el

método de momentos generalizados (GMM) ya que éste evita el problema de endogeneidad, que

suele ser característico de los modelos de panel dinámicos. Adicionalmente se incluyen variables

que pueden afectar la velocidad de convergencia como la escolaridad, el índice de pobreza

moderada, el gasto público como proporción del PIB y la ideología política.

Finalmente es importante señalar que no todos los datos fueron usados para calcular la

ecuación (9). Islam (1995) sugiere que se deben usar datos en intervalos de cinco años para

disminuir la correlación serial y la influencia de las fluctuaciones cíclicas. Shioji (1997) por otro

16

lado sugiere usar intervalos de dos años. En nuestro caso se usaron intervalos de dos años, de

forma tal que se pudo incluir la variable ideología, ya que –como mencionamos anteriormente-

las elecciones se suceden por intervalos de dos años. Adicionalmente seguimos la metodología

de Yu y Lee (2012) de usar promedios en lugar de un dato especifico9. Así pues al momento de

usar intervalos de dos años los primeros dos datos se encontrarían de la siguiente forma:

2

lnlnln 8988

89,88

yyy

2

lnlnln 9190

91,90

yyy

Y así sucesivamente hasta obtener los datos para toda la serie.

IV. Resultados

La tabla 1 muestra los resultados de estimar las ecuaciones (1) y (2) arriba mencionadas

mediante regresiones logísticas ordinales. En los cuatro modelos la variable dependiente puede

tomar los valores 1, 2, 3 o 4 siendo 1 el valor que representa sociedades con preferencias de

izquierda, mientras que 4 representa sociedades con preferencia de derecha.

Los resultados son consistentes en los 4 modelos propuestos. Como se puede ver la variable

referida a la agricultura tiene una incidencia positiva y estadísticamente significativa sobre el

índice de ideología. Es decir que, mientras la proporción del sector agrícola-ganadero con

respecto del PIB aumenta, es decir, mientras se posean mayores recursos naturales como tierra

fértil y pastizales para el ganado, la sociedad se vuelve más de derecha en sus preferencias

políticas-económicas. Este resultado no es de extrañar dados los supuestos que hemos indicado

9 Khan y Senhadji (2001) así como Montero y del Río (2013) –entre otros tantos autores- también usan la

metodología de promedio.

17

antes, en los que los votantes elegirán políticas que garanticen los derechos propietarios sobre

sus terrenos. Por otro lado cuando la proporción del sector extractivo con respecto al PIB

aumenta, o sea, cuando las sociedades poseen mayores recursos naturales de tipo extractivo, las

sociedades se vuelven más de izquierda. Nuevamente este resultado va de la mano con los

supuestos hechos con anterioridad dentro del marco teórico de la “Imagen del Bien Limitado”.

Más aún, cuando se desglosa el sector extractivo en sus dos componentes, se puede ver que el

sector relevante en este resultado negativo es específicamente el sector minero. Esto igual es

comprensible si se tiene en cuenta que el sector petrolero es normalmente intensivo en capital y

tecnología en lugar de fuerza de trabajo. Adicionalmente, la actividad petrolera es relativamente

nueva comparada con la extracción de minerales, y es esta última la que, generación tras

generación, ha ido formando la orientación cognoscitiva de los individuos y de las sociedades.

Finalmente el resultado negativo en cuanto al sector público tampoco debe sorprender. Las

sociedades que se benefician con mayor gasto público, van a tener preferencias de mayor

intervención estatal en la actividad económica, por tanto, elegirán políticas de redistribución del

ingreso en lugar de políticas del tipo laissez-faire.

Los resultados de usar el modelo de probabilidad lineal –en lugar del modelo ordinal logit- se

pueden ver en la tabla 2. Cualitativamente son similares a los de la tabla 1. Sociedades con

mayores recursos naturales extractivos tienden a votar por candidatos de izquierda, mientras que

sociedades con mayores recursos naturales agrícolas tienden a votar por candidatos de derecha.

Finalmente los resultados de la tabla 3 muestran que a medida que la razón de recursos naturales

agrícolas con respecto a los recursos naturales extractivos aumenta, las sociedades tienden a

elegir políticas que garanticen los derechos de propiedad, ergo tienden a ser mas de derecha. Este

resultado se obtiene independientemente de la aplicación de un modelo ordinal logit, o de un

18

modelo de probabilidad lineal, demostrando de esta forma lo robusto de nuestros resultados a

distintas especificaciones y métodos de estimación.

19

Tabla 1

Modelo 1 Modelo 2 Modelo 3 Modelo 4

Agricultura 0.157***

(0.033)

0.159***

(0.032)

0.159***

(0.033)

0.158***

(0.032)

Extractivos -0.037*

(0.074)

-0.041**

(0.021)

Público -0.167***

(0.059)

-0.179***

(0.067)

Minería -0.042**

(0.021)

-0.039*

(0.021)

Petróleo -0.013

(0.030)

-0.052

(0.034)

Punto de corte 2 -1.343*

(0.71)

-3.703***

(1.107)

-1.286*

(0.711)

-3.905***

(1.215)

Punto de corte 3 1.580**

(0.628)

-0.654

(0.997)

1.671***

(0.637)

-0.870

(1.129)

Punto de corte 4 6.350***

(1.086)

4.45***

(1.221)

6.423***

(1.085)

4.276***

(1.289)

Obs. 108 108 108 108

LR statistic 49.85*** 58.52*** 50.9*** 58.69***

Nota: Regresiones logística ordinal. La variable dependiente toma el valor (1) si la región es de izquierda,

(2) si es de centro-izquierda, (3) si es de centro-derecha y (4) si es de derecha. *** significativo al 1% o

menos. ** significativo al 5% o menos. * significativo al 10% o menos. Desviación estándar entre

paréntesis.

20

Tabla 2

Modelo 1 Modelo 2 Modelo 3 Modelo 4

Agricultura 0.037***

(0.007)

0.037***

(0.007)

0.038***

(0.007)

0.037***

(0.007)

Extractivos -0.011**

(0.005)

-0.012**

(0.005)

Público -0.040***

(0.008)

-0.040***

(0.009)

Minería -0.013**

(0.005)

-0.012**

(0.005)

Petróleo -0.004

(0.008)

-0.012

(0.009)

Intercepto 2.087***

(0.163)

2.613***

(0.196)

2.058***

(0.201)

2.612

(0.258)

Obs. 108 108 108 108

Log Likelihood -90.02 -86.18 -89.31 -86.18

Nota: Modelo lineal de probabilidad. La variable dependiente toma el valor (1) si la región es de

izquierda, (2) si es de centro-izquierda, (3) si es de centro-derecha y (4) si es de derecha. *** significativo

al 1% o menos. ** significativo al 5% o menos. * significativo al 10% o menos. Desviación estándar

entre paréntesis.

21

Tabla 3

Modelo 1 Modelo 2 Modelo 3 Modelo 4

Agricultura/Extractivos 0.232***

(0.054)

0.221***

(0.055)

0.0586***

(0.017)

0.054***

(0.018)

Público -0.085*

(0.052)

-0.025***

(0.008)

Intercepto 2.331

(0.146)

2.675***

(0.206)

Punto de corte 2 -2.002***

(0.384)

-3.200***

(0.840)

Punto de corte 3 0.394*

(0.246)

-0.758

(0.750)

Punto de corte 4 4.874***

(0.832)

3.766***

(1.056)

Obs. 108 108 108 108

LR statistic 25.64*** 28.35***

Log Likelihood -103.63 -102.5

Nota: Modelos 1 y 2 se obtienen por medio de regresión logística ordinal. Modelos 3 y 4 se obtienen

mediante el modelo lineal de probabilidad . La variable dependiente toma el valor (1) si la región es de

izquierda, (2) si es de centro-izquierda, (3) si es de centro-derecha y (4) si es de derecha. *** significativo

al 1% o menos. ** significativo al 5% o menos. * significativo al 10% o menos. Desviación estándar

entre paréntesis.

Como se mencionó en la introducción de la presente investigación, nuestro objetivo es

sugerir un nuevo canal de transmisión, mediante el cual, la relación negativa entre la abundancia

de recursos naturales y el crecimiento económico está condicionada por el tipo de recurso natural

que se posea en abundancia. En los resultados anteriores se presenta evidencia empírica que

22

mientras mayores recursos naturales de tipo extractivos poseen las sociedades, estas tienden a

preferir políticas de tipo izquierdistas. Ahora nos falta examinar de qué forma la ideología

política afecta al crecimiento económico.

La tabla 4 muestra los resultados de la regresión (9). Antes de analizar los resultados, es

bueno mencionar que la variable escolaridad solamente está disponible a partir del año 1997, por

lo que al incluir esta variable en nuestras regresiones el número de observaciones disminuye en

aproximadamente un 30%; por tanto se han obtenido resultados con y sin esta variable.

El rezago de la variable dependiente es altamente significativo (como era de esperarse).

Llama la atención que la escolaridad presente un coeficiente pequeño, pero negativo y

significativo. A pesar que este resultado es contra-intuitivo y parece violar los modelos básicos

de crecimiento, no por ello es un resultado inusual. De hecho Lorgelly y Owen (1999) observan

que el número limitado de observaciones puede ser la razón detrás de este resultado.

Pritchett(2001) y Bjørnskov (2005) tampoco pueden demostrar la relación positiva esperada

entre esta variable y el crecimiento. El gasto público como proporción del PIB tiene influencia

negativa sobre el crecimiento. Estos resultados son similares a los obtenidos por Montero (2012)

para el caso de Bolivia; lo que cual puede ser explicado por las distorsiones en la economía

causadas por la injerencia del sector público o por el efecto expulsión sobre la inversión privada.

En cuanto a nuestra principal variable de interés (ideología), se puede ver que en todos

los casos es positiva y estadísticamente significativa, lo que significa que la ideología tiene

incidencia sobre el crecimiento económico. Este resultado es congruente con nuestro modelo

teórico desarrollado anteriormente, ya que como se indicó en aquella oportunidad, las sociedades

predominantemente agrícolas-ganaderas (que tienden a ser más de derecha) tenderán a ser más

productivas que las sociedades con recursos naturales predominantemente extractivos (que a su

23

vez tienden a ser mas de izquierda). A esto vendríamos a llamar el efecto directo.

Adicionalmente existe un efecto indirecto que viene dado por la preferencia de política

expresada en las urnas, siendo las sociedades agrícolas más inclinadas a elegir políticas de

protección de los derechos de propiedad es de esperarse que sus instituciones –formales e

informales- tiendan a defender los derechos de propiedad, lo que a su vez favorece el crecimiento

económico (Knack y Keefer, 1995; Barro, 1996)

Tabla 4

Modelo 1 Modelo 2 Modelo 3 Modelo 4

)ln( 1ty 0.921***

(0.051)

0.856***

(0.067)

0.548***

(0.080)

0.579***

(0.082)

Escolaridad 3.11E-07

(2.55E-07)

-7.87E-07***

(2.36E-07)

-7.01E-07***

(2.39E-07)

Ideología política 0.027*

(0.0165)

0.035*

(0.020)

0.035**

(0.0177)

0.046**

(0.018)

Gasto público

como total del PIB

-0.023***

(0.004)

-0.022***

(0.004)

Índice de pobreza

moderada

-0.0006***

(0.0002)

-0.0007***

(0.0002)

-0.0005**

(0.0002)

Obs. 90 63 63 63

Nota: Método generalizado de momentos. La variable dependiente es el logaritmo del ingreso per cápita

promedio de dos años. *** significativo al 1% o menos. ** significativo al 5% o menos. * significativo al

10% o menos. En el modelo1 el valor prob de la variable ideología es 0.1063 por lo que fue redondeado

para abajo. Desviación estándar entre paréntesis.

24

V. Conclusiones

En esta investigación se presenta evidencia que el tipo de recurso natural abundante en una

sociedad puede influenciar las preferencias de política de los votantes. Sociedades con recursos

agrícolas abundantes tenderán a ser de derecha mientras que aquellas con recursos naturales

extractivos abundantes tenderán a tener preferencias ideológicas de izquierda. Esto se debe a que

la orientación cognoscitiva de ambas sociedades es distinta, y por tanto aquellas con abundante

recursos naturales extractivos estarán más próximas a la “Imagen del Bien Limitado” lo que las

llevará a situaciones de cooperación extrema o inclusive comunismo (Foster 1965) mientras que

aquellas con bastante recursos naturales agrícolas optaran por políticas de derecha basados en la

protección de sus predios agrícolas.

Adicionalmente se presentan resultados sobre el efecto que la ideología tiene sobre el

crecimiento económico. En base a estos resultados podemos concluir que la maldición de los

recursos naturales es más proclive en sociedades con abundantes recursos naturales de tipo

extractivo que en sociedades con abundantes recursos naturales de tipo agrícola-ganadero.

Existen dos efectos que se pueden identificar en esta relación. El primero es un efecto directo

que tiene que ver con la falta de incentivos a aumentar la productividad en sociedades

predominantemente mineras. El segundo es un efecto indirecto que viene dado por las

preferencias de los votantes a políticas de tipo intervencionista, con poca o nula protección a los

derechos individuales de propiedad en las sociedades mineras, mientras que lo contrario sería

cierto para sociedades agrícolas-ganaderas.

25

Referencias

Acemoglu, D. y Robinson J. (2012) “Why Nations Fail” Crown Publishing Group, primer

edición.

Barro, R. (1996). "Democracy and Growth." Journal of Economic Growth 1, 1-28.

Bjørnskov, C. (2005). “Does Political Ideology Affect Economic Growth?” Public Choice,

123(1-2), 133-146.

Boschini, A. D., Pettersson, J., & Roine, J. (2007). “Resource Curse or Not: A Question of

Appropiability”. The Scandinavian Journal of Economics, 109(3), 593-617.

Foster, George M. (1965). “Peasant Society and the Image of Limited Good”, American

Anthropologist. Vol. 67, Issue 2 pp. 293-315.

Gelb, A. H. (1988). “Oil Windfalls: Blessing or Curse?” World Bank Research Publication,

Oxford University Press.

Gylfason, T. (2001). “Natural Resources and Economic Growth: What is the Connection?”

Center for Economic Studies & Ifo Institute for Economic Research. CESifo Working Paper No.

530. Munich, Germany.

Hotte, L. (2005). “Natural Resource Exploitation with Costly Enforcement of Propoerty Rights”.

Oxford Economic Papers, 57(3), 497-521.

Islam, N. (1995). “Growth empirics: A panel data approach”. Quarterly Journal of Economics,

vol. 110(4), pp. 1127–1170.

Khan, M y Senhadji A. (2001). “Threshold Effects in the Relationship between Inflation and

Growth” IMF Staff Papers, vol. 48, No 1.

26

Knack, S., and P. Keefer. (1995). "Institutions and Economic Performance: Cross-Country Tests

Using Alternative Institutional Measures." Economics and Politics 7, 207-227.

Lorgelly, P. y Owen, P. (1999). “The Effect of Female and Male Schooling no Economic Growth

in the Barro-Lee model” Empirical Economics, vol. 24 (3), 537-557.

Mehlum, H., Moene, K., & Torvik, R. (2006). “Institutions and the Resource Curse” The

Economic Journal, 116(508), 1-20.

Montero C. del Río M. (2013) “Convergencia en Bolivia: Un Enfoque Espacial con Datos de

Panel Dinámicos” Revista de Economía del Rosario, Vol. 16, No. 2, Diciembre/2013.

Montero C. (2012) “Inversión Pública en Bolivia y su Incidencia en el Crecimiento Económico:

Un Análisis desde la Perspectiva Espacial” Revista de Analisis del Banco Central de Bolivia, vol.

16(1) 37-57.

Pickering, A., Rockey, J., 2011. “Ideology and the Growth of Government” Review of

Economics and Statistics 93, 907–919.

Pritchett, L. (2001). “Where has all the Education Gone”? World Bank Economic Review, vol.

15(3), 367-391.

Shioji, E. (1997). “It’s Still 2%: Evidence on convergence from 116 years of the US States panel

data”. Economics Working Papers 236. Department of Economics and Business, Universitat

Pompeu Fabra, Barcelona.

Van der Ploeg, F. (2011). “Natural Resources: Curse or Blessing?” Journal of Economic

Literature, 366-420.

27

Rodriguez, F., & Sachs, J. D. (1999). “Why do Resource-Abundant Economies Grow More

Slowly?” Journal of Economic Growth, 4, 277-303, September 1999.

Sachs, J. & Warner, A. (1997) “Natural Resource Abundance and Economic Growth” Center for

International Development and Harvard Institute for International Development. Harvard

University, Cambridge MA.

Wright, G. (2001, June). “Resource-Based Growth Then and Now”. In World Bank Project

“Patterns of Integration in the Global Economy”, June.

28

Anexo

Para el primer periodo:

Max U1 : ∝ ln w1 + ln(1 − e1 ) + 1

1 + δ [α ln w2 + ln(1 − e2)]

Max U1 ∶ ∝ ln [ a(e0 )√e1] + ln(1 − e1 ) +1

1 + δ[∝ ln(a(e1)√e2) + ln(1 − e2)]

∂ U1

∂e1=

∝12 a(e0)e1

− 12

a(e0)√e1

− 1

1 − e1+

∝ ae1 √e2

(1 + δ)(a(e1)√e2)= 0

∝

2e1−

1

1 − e1= −

α ae1

(1 + δ) a(e1)

∝ (1 − e1) − 2e1

2e1(1 − e1)= −

αae

(1 + δ)a (e1)

2e1−∝ +∝ e1

2e1(1 − e1)=

αae

(1 + δ)a (e1)

(2+∝)e1−∝

2e1(1 − e1) (1 + δ) =

αae

a(e1)

Para el Segundo periodo:

Max U2 : ∝ ln c2 + ln(1 − e2) s.t. c2 = w2

Max U2 : ∝ ln w2 + ln(1 − e2)

∂U2

∂e2=

∝ (12

a(e1̅) e2

− 12)

a(e1̅)√e1

− 1

1 − e2= 0

∝

2√e2 √e2

− 1

1 − e2= 0

∝

2e2−

1

1 − e2= 0

29

∝ −∝ e2 − 2e2

2e2(1 − e2)= 0

∝ −∝ e2 − 2e2

∝ e2 − 2e22 = 0

∝=∝ e2 + 2e2

e2 =∝

2+∝

e2 =∝ (2+∝)−1