COLEGIO TERESIANO  ENRIQUE DE OSSÓ 

 

PROYECTO  EDUCATIVO PASTORAL 

Í N D I CE 

Págs.

Presentación............................................................................................................01 Introducción.............................................................................................................02 1. Nuestra Misión........................................................................................................03

2. Fundamentos y Principios Pastorales:

2.1. Espiritualidad Teresiana...............................................................................04 2.2. Nuestra Propuesta Educativa ......................................................................05 2.3. Comunidad Educativa Teresiana:

A. La Religiosa Teresiana............................................................................08 B. La Familia................................................................................................09 C. El/la Alumno/a.........................................................................................10 D. El/la Educador/a......................................................................................11 E. El Personal No Docente..........................................................................13 3. Fundamentos Educativos:

3.1. Principios Pedagógicos de San Enrique de Ossó .......................................14 3.2. Fuentes del Currículo Escolar.......................................................................15 3.3. Principios Básicos de nuestra pedagogía.....................................................17 3.4. El Marco Legal del Diseño Curricular ...........................................................18 3.5. Organización Curricular:

A. Los Ciclos de Enseñanza.........................................................................19 B. Áreas de Formación.................................................................................21 C. Sectores de Aprendizaje..........................................................................23 D. La Evaluación Escolar..............................................................................23 4. Estructura y Organización de la Comunidad Educativa:

4.1. Organización Administrativa General : A. Dirección..................................................................................................24 B. Áreas Estratégicas...................................................................................24 C. Consejos..................................................................................................26 D. Comité de Ciclo…....................................................................................26 E. Organismos Colaboradores.....................................................................27 Anexos a este Proyecto: - Pedagogía Teresiana. - Planes y Programas. - Planes de las Áreas. - Organigrama. - Reglamento Interno. - Reglamento del Alumno. - Reglamento de Perfeccionamiento.

   

PRESENTACIÓN    

Respondiendo a los desafíos que nos presenta el tercer milenio, tengo el gusto de presentar a ustedes la nueva versión del Proyecto Educativo del Colegio Teresiano Enrique de Ossó. El presente documento se ha elaborado con la participación de toda la Comunidad Educativa. Desde 1996, cuando dimos comienzo al Proyecto TEO 2000, cuyo principal objetivo era la actualización de nuestro Proyecto Educativo, todos los estamentos, hemos trabajado con esmero en esta meta. Muchas han sido las encuestas, reuniones y jornadas, en las que hemos expresado nuestros sueños, fortalezas, debilidades y deseos sobre el Colegio. El documento recoge y sintetiza las grandes inquietudes expresadas por toda la Comunidad Educativa en este proceso. A lo largo de este tiempo, varios borradores han sido redactados y revisados por los diferentes estamentos: alumnos, auxiliares, exalumnos, padres y profesores, hasta llegar a la versión que hoy les presentamos. Al elaborar el presente Proyecto no hemos partido de cero, sino que contamos con toda la experiencia acumulada en años anteriores. En él se recogen los grandes y principales planteamientos de nuestro Proyecto anterior. No queremos olvidar que lo que hoy somos y tenemos, es gracias a todo el esfuerzo realizado por muchas personas a lo largo de muchos años. Nuestro Proyecto Educativo es el principal instrumento para la evangelización. Expresa los rasgos generales que caracterizan al Colegio. Asumiendo la tradición teresiana, define su identidad en una sociedad pluralista, en la que coexisten diversas interpretaciones del ser humano, del mundo y de la vida. Formula los objetivos, el concepto de persona, los medios para que el alumno desarrolle todas sus capacidades y describe el modelo organizativo de la Institución. Es marco de referencia para todas las decisiones, que a todos los niveles, se realicen en el Colegio. El presente Proyecto consta de cuatro partes: la primera presenta nuestra Misión Institucional que resume los grandes ideales y metas que nos proponemos. La segunda describe la naturaleza de la Escuela Teresiana, sus fundamentos y principios pastorales, la tercera manifiesta los fundamentos y principios educativos pedagógicos y la cuarta, el modelo organizativo que adopta. El Proyecto Educativo se explicita y complementa con otros documentos más concretos y operativos, como son: los Planes y Programas de cada ciclo, los Proyectos de cada una de las Áreas, El Reglamento del Alumno, el Reglamento de Régimen Interno y el Reglamento de Perfeccionamiento. Ese documento es un desafío para todos los que integramos esta comunidad. Invito a todos a asumirlo y a hacer vida los grandes ideales que encarna. Finalmente quiero agradecer a todos los que en forma generosa y desinteresada han dedicado muchas horas de su tiempo para hacer posible este documento. Que el Señor los bendiga y nos ayude a todos a hacerlo realidad.

Hna. Rosaura Jorge Martín Directora

1. 

INTRODUCCIÓN    

El Colegio Teresiano Enrique de Ossó pertenece a la Compañía de Santa Teresa de Jesús, Congregación religiosa femenina, fundada por Enrique de Ossó y Cervelló. Este sacerdote y pedagogo español fue canonizado el 16 de junio en 1993, en Madrid, por su Santidad Juan Pablo II. La Congregación, nacida en España en 1876, se extiende actualmente por Europa, América, África y Asia. Tiene como misión regenerar la sociedad formando a la niñez y juventud, según el espíritu de Santa Teresa de Jesús, misión que realiza preferentemente a través de la escuela. La Compañía llega a Chile en 1916, iniciando su apostolado en Santiago con una Residencia Universitaria y un Colegio con el nombre de Santa Teresa de Jesús, en la calle Echaurren, hasta 1967. En esta fecha se traslada a su residencia actual, Avda. Ossa Nº 1157. En 1984, por su condición de colegio mixto, se ve la conveniencia de cambiar de nombre denominándose Colegio Teresiano Enrique de Ossó. Este establecimiento es particular pagado, coeducacional, diurno, científico-humanista, con los niveles de Pre-Básica, Educación General Básica y Educación Media. Tiene una población escolar promedio de 1200 alumnos y 750 familias aproximadamente, de un nivel socioeconómico medio, proviniendo principalmente de las comunas de La Reina, Ñuñoa, Peñalolén, La Florida, y Macul. El Colegio Teresiano es y realiza una misión de Iglesia. Aspira a ser un foco de evangelización y de preparación de personas comprometidas en la transformación del mundo de hoy. Su ideal educativo es Cristo. Promueve la educación integral de los alumnos según la concepción católica del hombre, del mundo y de la vida. Propone un estilo educativo y unos valores inspirados en Teresa de Jesús y fundamenta su tarea educativa en los principios pedagógicos de Enrique de Ossó, teniendo en cuenta los modelos pedagógicos actuales. Educa con el convencimiento de que la Escuela desempeña un papel primordial en la sociedad, en su regeneración y en la transmisión de los valores espirituales y religiosos. Su acción incide especialmente en la familia, a quien reconoce como agente insustituible de renovación. Se organiza y vive en Comunidad Educativa. Este carácter comunitario brota de su naturaleza cristiana y da fecundidad y coherencia a su acción. Está abierto a todos los que desean el tipo de educación que imparte. Arraigado en la cultura de su tiempo e inserto en el lugar en que vive, proyecta su acción en el entorno y quiere ser un servicio a la Iglesia y a nuestro país, atendiendo a sus requerimientos y a los grandes desafíos que hoy nos presenta el sistema educacional chileno.      

2. 

1. NUESTRA MISIÓN.   

¿QUIÉNES SOMOS?  

El Colegio Teresiano Enrique de Ossó es una Comunidad Educativa Católica y Teresiana. Su acción se funda en la fidelidad a los valores evangélicos, el Magisterio de la Iglesia, la espiritualidad de Santa Teresa de Jesús y los principios pedagógicos de San Enrique de Ossó. Todo lo cual se expresa en la búsqueda de un camino de adhesión a la persona de Cristo, nutrido por la oración diaria, como relación personal y comunitaria con Dios.

¿CUÁL ES NUESTRA CONCEPCIÓN EDUCATIVA?  

Buscamos educar desde una concepción humanista y cristiana de la persona y del mundo, promoviendo el desarrollo personal y comunitario, mediante la adhesión a los valores teresianos de: verdad, fortaleza, solidaridad y alegría. Procuramos ser un espacio de interacción humana, en el cual todos sus miembros se desenvuelven y relacionan en un ambiente de libertad, respeto, participación y confianza. Nuestra concepción pedagógica y estilo educativo tiene como centro el respeto a la persona y a sus diferencias individuales. Ésta se expresará en la aplicación de métodos activos y en el desarrollo de aprendizajes significativos, que favorezcan en nuestros alumnos la autonomía, la creatividad, el espíritu crítico, la auto-reflexión y el trabajo colaborativo, en un clima de perseverancia y responsabilidad. Nuestra organización interna busca facilitar la participación y la co-responsabilidad en el logro de los objetivos institucionales.

¿CÓMO NOS PROYECTAMOS?  

Nos abrimos y proyectamos al entorno con actitud de colaboración y enriquecimiento mutuo. Nuestro compromiso es aportar a la Iglesia y a la Patria hombres y mujeres preparados para responder a las necesidades y requerimientos de la sociedad actual y futura; poniendo sus competencias y capacidades al servicio de la humanización y evangelización de la cultura.

3. 

2. FUNDAMENTOS Y PRINCIPIOS PASTORALES. 

2.1.   ESPIRITUALIDAD TERESIANA.  

La Escuela Teresiana anima e incentiva a la Comunidad Educativa para hacer realidad el compromiso de vivir con autenticidad el cristianismo con el sello propio de la espiritualidad teresiana, que se caracteriza por:

- Amor vivo y personal a Jesucristo expresado CRISTOCÉNTRICA en criterios y actitudes evangélicas.

- Experimentar en la historia personal la presencia maternal de María. Imitarla MARIANA en la fe, esperanza, amor y en la búsqueda de la voluntad de Dios.

- Adhesión inquebrantable a la Iglesia, al vicario ECLESIAL

de Cristo y a su Magisterio. La Escuela Teresiana realiza la síntesis entre fe- cultura-vida, por el camino de la interioridad, la comunidad y la solidaridad. La INTERIORIDAD, es la capacidad humana de Descubrimiento y desarrollo introspección, para descubrir el mundo interior y para del mundo interior. desarrollar una actitud contemplativa hacia el exterior, Relación interpersonal posibilitando la relación interpersonal profunda con Dios. profunda con Dios. El proceso de interiorización, desde la perspectiva teresiana, se inicia en el propio conocimiento y culmina cuando la persona encuentra en su interior el sentido que Conocimiento propio. le unifica y le da identidad, es decir, cuando la persona entra en comunión con el mismo Dios de Jesús y, desde esta comunión, descubre su misión de ser para los demás, su talante solidario y su acción en favor de la construcción del Reino. La COMUNIDAD, entendida como ámbito de crecimiento de la persona, como lugar de formación y existencia. Dios nos hizo a su imagen. Y Él Vivencia de la fraternidad. es Comunidad. Desde el encuentro con Dios, la espiritualidad Teresiana abre a la persona al encuentro con el otro y le lleva a vivir en verdadera fraternidad. Desde la perspectiva cristiana la SOLIDARIDAD es la dimensión activa de la interioridad. La solidaridad cristiana exige, primeramente, haber interiorizado el dolor Servicio solidario del hermano y comprender que en el dolor de cualquier ser humano sufre Jesús. Cuando la solidaridad nace de esta experiencia profunda de comunión con Dios 4.

se traduce en servicio desinteresado y en generosidad, especialmente con los más pobres y necesitados, en favor de una sociedad más justa y humana.

M.T.A. Vivencia de la

espiritualidad Teresiana en comunidad de fe.

Estos tres caminos -interioridad, comunidad, solidaridad- configuran el itinerario teresiano de crecimiento en la fe que no termina con la etapa escolar. Nuestra espiritualidad se vive también integrando el Movimiento Teresiano de Apostolado (M.T.A.), que ofrece la posibilidad de recorrer este camino de la fe en comunidad a todos aquellos que se sienten llamados a vivir en profundidad su compromiso bautismal, con el estilo que la familia teresiana ha recibido de Enrique de Ossó. Pueden pertenecer a este movimiento: - Los niños, en su Rama de Amigos de Jesús, - Los adolescentes y jóvenes, en su Rama de Jóvenes, - Los adultos (ex-alumnos, apoderados y otros miembros de la Comunidad Educativa), en la Rama de Comunidades M.T.A.

2.2. NUESTRA PROPUESTA EDUCATIVA.  Nuestra escuela promueve: una educación integral, católica y teresiana. Desarrollo integral, equilibrado y armónico.

A. Una Educación Integral. 

La Escuela Teresiana tiene como objetivo que el alumno desarrolle en equilibrio y armonía todos sus valores personales y sus potencialidades dentro de una concepción cristiana de la vida: - principios rectos y sólidos, motivadores de su quehacer diario, - espíritu crítico y creador que le capacite para discernir y afrontar nuevas situaciones, - libertad responsable que le permita tomar decisiones coherentes y realizarlas, - sensibilidad para captar, apreciar y asimilar los valores humanos, - desarrollo físico y sicoafectivo adecuados que le permitan descubrir su identidad corporal, entrar en relación con los demás y expresarse. - dominio de las competencias e instrumentos del saber, para comprender el mundo, desarrollar sus capacidades y comunicarse con los demás.

5. 

Procura despertar la inquietud por la búsqueda de la verdad, facilita el acceso al patrimonio de la cultura conquistada por las generaciones pasadas, la apertura a los avances científicos y tecnológicos, la interpretación y valoración de la realidad y la asimilación crítica del universo cultural. Una aspiración de la Escuela es preparar para una vida profesional competente. Estimula a superar el individualismo y ayuda a descubrir a la luz de la fe que el hombre está llamado a vivir de manera responsable, con generosidad y espíritu de servicio, en solidaridad con los demás hombres. Procura desarrollar la capacidad de liderazgo, según los particulares talentos de cada uno, y estimula a ejercerla con actitud de servicio desinteresado, comprendiendo que el acceso a su propia realización integral sólo es posible desde la inserción en su momento histórico y en su propio pueblo. Esta inserción supone conocer, amar y asumir su cultura, sus tradiciones y sus costumbres.

B. Una Educación Católica.  La Escuela Teresiana persuadida del valor humanizador de lo religioso, se apoya en la fuerza y fecundidad del Evangelio para llevar al hombre a su plenitud. Considera que el hombre está destinado a la más alta dignidad, la de hijo de Dios, y a la más plena libertad, la que Cristo ofrece; por eso: - educa en y para la libertad, - abre caminos de fraternidad que van más allá de cuanto exigen el respeto y la igualdad entre los hombres, - prepara a los alumnos para ser constructores de la paz y de la nueva civilización del amor, la verdad y la justicia que Cristo trae como mensaje. Propone la síntesis entre fe, cultura y vida, en la que el conjunto de los saberes y de los valores cristianos genera criterios y actitudes evangélicas, y comportamientos coherentes con esas actitudes y criterios.

Búsqueda de la verdad. Capacidad de liderazgo. Educación apoyada en la fuerza y fecundidad del Evangelio. Síntesis entre fe, cultura y vida.

6. 

Catequesis sacramental.

Celebración de la fe.

Imparte enseñanza religiosa y catequesis sacramental según las orientaciones de la Iglesia Católica. Celebra la fe, comunitaria y personalmente, en un marco de respeto y libertad. Estimula las inquietudes religiosas, sociales y pastorales de la Comunidad Educativa y ofrece respuesta y cauces adecuados a las mismas. Con este fin, promueve la creación de asociaciones y grupos apostólicos.

“Cuarto de Hora de Oración”: Encuentro personal con Dios.

Sello teresiano.

Valores y Virtudes Teresianas.

C. Una Educación Teresiana. 

La Escuela Teresiana educa a sus miembros en la apertura al encuentro personal con Dios en la oración, les enseña a orar y dedica cada día un espacio para ese encuentro en el "Cuarto de hora de oración", legado inestimable de su Fundador. También es característico de la Escuela Teresiana cultivar las virtudes síntesis del humanismo teresiano: verdad, fortaleza, solidaridad y alegría. El "andar en verdad" teresiano anima a los miembros de la Comunidad Educativa a vivir con sinceridad, lealtad, humildad y sencillez, manifestando en su decir y en su hacer la verdad de su propia vida. La "determinada determinación" y la magnanimidad definen la fortaleza y grandeza de alma en Teresa de Jesús. La Escuela Teresiana educa para la aceptación del riesgo, la amplitud de miras, el compromiso en la entrega y el propósito firme y decidido de perseverar hasta el fin en la búsqueda del bien y de la verdad. La gratitud y solidaridad humanizan la vida diaria y crean lazos de cordialidad. La Escuela Teresiana, educando en estos valores, conduce a un generoso desinterés por lo propio y a la superación del egoísmo. El estilo teresiano tiene el sello de la alegría, que lanza al hombre, y especialmente al niño y al joven, a una entusiasta entrega a sus tareas, y a una relación humana y religiosa llena de vigor interior, ilusión y audacia.

7.

2.3. COMUNIDAD EDUCATIVA TERESIANA.  

Nuestra Comunidad Educativa está formada por: la Religiosa, la Familia, el Alumno, el Educador y el Personal no docente.

A. La Religiosa Teresiana.  La religiosa teresiana es una mujer consagrada a Dios para vivir el seguimiento radical a Jesucristo según el carisma teresiano de Enrique de Ossó que se caracteriza por el ardiente amor a Jesucristo, la adhesión inquebrantable a la Iglesia y al Papa y la vida de oración, enseñanza y sacrificio. Encarna y hace presente las características teresianas: persona de oración continua, verdadera y franca, desprendida, inquebrantable en su fortaleza, generosa, sencilla, alegre, humilde y obediente. Se compromete en la misión de extender el reinado del conocimiento y amor de Jesucristo, expresada en una forma de ser y de estar en el mundo, determinada por la propia identidad. Dedicada por vocación a la educación cristiana, está y se siente llamada a dinamizar la misión de la Comunidad Educativa. Es central en su misión la oración, como dinamismo transformador de su vida y siendo apóstol del "Cuarto de Hora de Oración" entre los niños, jóvenes, personal y familias de la Comunidad Educativa. La Religiosa Teresiana se distingue por su espíritu universal; está dispuesta a desarrollar su labor apostólica en cualquier lugar y ocupación, con entera disponibilidad. Promueve la reflexión y el discernimiento respecto a los valores y contravalores de las diversas culturas. Considera la diversidad de ellas como una riqueza en la que se expresa el polifacético rostro de Dios.

Mujer consagrada a Dios. Llamada a dinamizar la Comunidad Educativa. Comprometida en la Evangelización. Espíritu universal y entera disponibilidad.

8.  

Fiel a la tradición y estilo apostólico de la Compañía.

Es fiel al estilo particular y a una tradición que va creando el propio apostolado. Este estilo y esta tradición tienen unas características que no están condicionadas por el lugar ni por el tiempo. Características de este estilo y tradición apostólicos son:

- la preocupación por una constante actualización (en frase de San Enrique de Ossó "ser mártires

del estudio"). - la capacidad para aceptar a las personas como

son y ayudarlas a descubrir su misión en la vida. - el interés por usar un lenguaje comprensible a

quienes trata, que permita "entrar con la suya y salir con la nuestra: ellos hablan del mundo, nosotros de Dios" (Enrique de Ossó).

- el desprendimiento y sencillez en el trato, sin levantar barreras a la cercanía y comunicación y sin crear lazos que quiten libertad.

- la cordialidad y afabilidad en sus relaciones, estando siempre dispuesta a disculpar, a dar el primer paso.

- el hacer las cosas con orden, aseo y buen gusto.

Primera educadora de los hijos. Testimonio de vida cristiana. Amor y respeto a los hijos.

B. La Familia.  La familia es la primera educadora de sus hijos y en esta tarea es irremplazable. Tiene la misión de custodiar y comunicar el amor como reflejo del amor de Dios. Inicia a los hijos en la fe cristiana con el Bautismo católico y los ayuda al crecimiento y maduración en la Fe. Da testimonio de su vida cristiana, participando en la Iglesia. En la Eucaristía encuentra la plenitud de comunión y participación, y de Cristo recibe fuerzas para re-crear el amor. La familia es fuente de amor, está al servicio de la vida en todas sus manifestaciones; la promueve, respeta y defiende desde el momento de la concepción. Los padres aceptan y aman a sus hijos como son, respetan sus capacidades, diferencias y ritmos. Conocen sus talentos y les exigen de acuerdo a ellos. Los estimulan e incentivan a desarrollar sus potencialidades. Valoran sus esfuerzos y logros.

9

Los apoderados se preocupan de su propia formación, participando en la vida de la Comunidad Teresiana, a través de las diferentes instancias pastorales y formativas que el Colegio les ofrece durante todo el proceso educativo de sus hijos. Se preocupan por conocer los principios, estilo de vida e identidad de la Comunidad Educativa Teresiana. Hacen suyos los valores de Santa Teresa de Jesús y de San Enrique de Ossó y los viven de acuerdo a sus posibilidades. Favorecen especialmente un ambiente adecuado para desarrollar en sus miembros el espíritu de la Oración Teresiana, a través del Cuarto de Hora de Oración. La familia teresiana asume como propio el Proyecto Educativo del Colegio, se compromete con él y colabora activamente en su implementación.

C. El Alumno.  El objetivo fundamental de la educación teresiana lo constituye la formación del alumno, es esta finalidad la que orienta e ilumina todo su quehacer educativo. El alumno teresiano es una persona que progresivamente va desarrollando sus dones y potencialidades, dadas por Dios, para su plena realización personal, y para ponerlas al servicio del bien común. Se conoce y valora a sí mismo, asumiendo sus fortalezas y debilidades. Manifiesta su amor a Dios creciendo en la Fe, desarrollando una capacidad de interioridad y trascendencia, en una búsqueda permanente de Dios. Su compromiso con el Señor se manifiesta reconociendo su presencia en el prójimo, respetando la dignidad humana y realizando acciones solidarias concretas, especialmente para con los más necesitados. El alumno teresiano, consciente de la responsabilidad que tiene como cristiano, en la construcción de una sociedad más humana, asume con interés y dedicación su formación personal y académica, alcanzando las metas propuestas, de acuerdo a sus propias capacidades.

Participa y se identifica con la vida de la Comunidad Educativa Teresiana.  Sujeto fundamental en la educación teresiana Realización personal y servicio al bien común. Búsqueda permanente de Dios. Sentido cristiano de la responsabilidad.

10.

Trabajo en equipo.

De acuerdo a su nivel de madurez, enfrenta con serenidad, esfuerzo y dedicación las tareas que le corresponde realizar, tanto en su vida escolar como social. En este contexto valora y promueve el trabajo en equipo y los espacios de interacción humana, relacionándose armónicamente con los demás, especialmente con sus compañeros y

educadores, con quienes establece una relación de respeto, afecto y colaboración.

Liderazgo social.

Estilo de vida.

Facilitador del proceso educativo.

Compromiso cristiano

con el Evangelio.

Compromiso con el

Proyecto Educativo.

Reconoce en el amor la fuerza más eficaz, para alcanzar la verdadera paz social, se proyecta en la sociedad como hombre y mujer de diálogo, respetando las opiniones ajenas, trabajando incansablemente por crear una sociedad democrática, justa y solidaria. Su coherencia con los valores del Evangelio le hacen optar por un estilo de vida sencillo, auténtico y solidario. Valora la naturaleza como obra creada por Dios, y se compromete en su cuidado.

D. El Educador.  En la educación teresiana, el educador tiene un rol decisivo: facilita, anima y orienta a los alumnos en el proceso educativo, complementando así la acción formativa de los padres. Tiene el Evangelio como fuente de vida, reflexiona la Palabra de Dios y se compromete en el Proyecto de Jesús, haciendo del servicio y la entrega a los demás su forma de vida. Conoce el magisterio de la Iglesia y acoge sus orientaciones, incorporándolas en su actuar. Vive las virtudes del humanismo teresiano: verdad, fortaleza, solidaridad y alegría. Con su actitud favorece un clima de "unión y concordia" entre todos los integrantes de la comunidad.

Se identifica y compromete con el Proyecto Educativo realizando su acción de acuerdo a la espiritualidad de Santa Teresa de Jesús y de San Enrique de Ossó.

11. 

El educador teresiano anima a sus alumnos hacia el encuentro con Dios, consigo mismo, los demás y el mundo. Los apoya con entusiasmo en el crecimiento de su fe. Contribuye al desarrollo de personalidades fuertes, responsables, capaces de hacer opciones libres, honestas y justas. Conoce personalmente a sus alumnos en todas las dimensiones de su desarrollo, respeta su individualidad y las diferencias entre hombres y mujeres. Exige de ellos el máximo de sus potencialidades, estimula sus logros y los alienta a superar sus dificultades.

Formación personal y valórica. Respeto a las diferencias individuales.

Confía en sus alumnos y permite que ellos confíen en él, estableciendo una relación de respeto, afecto y de trabajo colaborativo; está abierto y disponible para atenderlos en toda ocasión. Desarrolla el orden y la disciplina en el trabajo escolar, haciendo cumplir las disposiciones reglamentarias del Colegio. Acorde con las demandas actuales de la educación, el educador teresiano es una persona abierta al cambio, motivada por su crecimiento personal y profesional; está permanentemente perfeccionando sus competencias

Relación de cercanía con los alumnos.

humanas y pedagógicas; busca e incorpora nuevas y mejores estrategias; aplica en sus clases metodologías activas, motivando a sus alumnos a ser agentes de su propio aprendizaje. Valora y desarrolla la aptitud para el trabajo colaborativo, participando en proyectos comunes con responsabilidad y profesionalismo; respeta y acoge los aportes de sus compañeros.

Actualización permanente.

12. 

Compromiso cristiano.

E. El Personal No Docente.  El personal no docente en funciones administrativas o de servicio, colabora en la acción educativa, facilitando las condiciones físicas y materiales que ésta requiere. Por tanto su aporte personal y profesional es de vital importancia para la comunidad. Teniendo el Evangelio como fuente de vida, reflexiona la Palabra de Dios y se compromete con el proyecto de vida propuesto por Jesús. Realiza con alegría y entrega generosa su vocación de servicio.

Compromiso con el Proyecto Educativo.

Acción formadora.

Desarrollo personal y profesional.

Se identifica y compromete con el Proyecto Educativo, realizando su acción de acuerdo a la espiritualidad de Santa Teresa de Jesús y de San Enrique de Ossó. Vive las virtudes del humanismo teresiano: verdad, fortaleza, solidaridad y alegría. Con su actitud favorece un clima de “unión y concordia" entre todos los integrantes de la comunidad educativa. El personal no docente conoce su rol en la comunidad y comparte lo que ésta es y ofrece. Es consciente que su acción es formadora y que influye en el desarrollo de los alumnos. Valora y se preocupa permanentemente de su perfeccionamiento personal y profesional, desarrolla la aptitud para el trabajo colaborativo, participando en proyectos comunes con responsabilidad y profesionalismo, respeta y acoge los aportes de sus compañeros. Cultiva las relaciones interpersonales fraternas, creando un clima familiar, grato y solidario.

13.

3. FUNDAMENTOS EDUCATIVOS   

3.1. PRINCIPIOS PEDAGÓGICOS DE SAN ENRIQUE DE OSSÓ.  En nuestra pedagogía, para que el alumno sea responsable de su propio crecimiento, debe desarrollar al máximo sus capacidades, participando con libertad y responsabilidad en el desarrollo de su comunidad. Fundamentado en San Enrique de Ossó, nuestro quehacer diario debe caracterizarse por lo siguiente: El conocimiento, la atención y el respeto al ritmo propio de cada uno de los alumnos. "Para educar bien, procurad, ante todo, estudiar la índole, carácter, condición, educación e inclinaciones de vuestros alumnos... Cuidad también de que se conozcan a sí mismos... Tened en cuenta al señalar los trabajos, las fuerzas, complexión, educación y talento de vuestros alumnos... Haced que sepa guiarse por sí mismo, como hombre libre, haciendo buen uso de su libertad" (Enrique de Ossó)

Autonomía responsable y participación comunitaria. Respeto al ritmo propio.

La relación personal con cada uno de los alumnos. "El obrar con espíritu de fe y mostrar a los alumnos amor e interés por su bienestar y felicidad es el mejor medio de ganarles el corazón... Hablad a cada uno en particular... y guardad con gran prudencia la confianza que os depositen" (Enrique de Ossó). La educación integral. "La educación y la religión no tienen otro fin que perfeccionar al hombre” “...cultivando a la vez su dimensión religiosa, moral, intelectual, estética y física" (Enrique de Ossó). La colaboración, el trabajo en equipo y la actualización constante. "Debe reinar entre los profesores la unión más cordial y perfecta"..."Haya unidad en el plan de educación. Concurran todos a desarrollar este plan”. "Aprended cada día algo nuevo, ensanchad los conocimientos para ejercer con más provecho el apostolado de la enseñanza." (Enrique de Ossó).

Relación personal con el/la alumno/a. Educación integral. Colaboración y trabajo en equipo.

14. 

El ejemplo es el medio

más eficaz.

Concordia entre padres y

educadores/as.

El testimonio personal y la concordia entre todos como la mejor escuela de valores. "Enseñad más con el ejemplo que con las palabras. El ejemplo es el medio más eficaz... y mueve más que las palabras... Más creemos en lo que vemos que en lo que oímos" (Enrique de Ossó). "Si las palabras y ejemplos del maestro son el eco de las palabras y ejemplos de los padres, la educación será completa (...) Los padres y pedagogos nunca deben desaprobar unos lo que han hecho los otros, ni juzgarlos mal ante sus hijos o discípulos (...) Si no hay concordia entre todos los que trabajan por educar, el trabajo será nulo. Los padres y maestros deben mostrarse en todo ejemplares de buenas obras" (Enrique de Ossó).

3.2. FUENTES DEL CURRÍCULO ESCOLAR 

Fuentes del Currículum.

El diseño curricular se apoya en cuatro fuentes primarias: las formas culturales necesarias para el crecimiento personal del alumno (factor sociológico); los procesos implicados en ese crecimiento personal (factor psicológico); la naturaleza de los contenidos de aprendizaje (factor epistemológico) y los aspectos de la práctica pedagógica (factor pedagógico).

Sociedad y cultura. Desarrollo y aprendizaje.

La sociedad y la cultura. Nuestro Colegio asume la tarea de ser corresponsable con la familia en la formación de una persona integral que, desde una concepción cristiana, adquiera conocimientos y competencias que le permitan insertarse en la sociedad, aptitudes para comunicarse con otros y trabajar en equipo, facilitar el desarrollo de la creatividad y el pensamiento reflexivo, y actitudes para vivir en familia y cuidar de su salud y del entorno. Desarrollo del niño y naturaleza del aprendizaje. Cada persona aprende de un modo particular, activando en cada situación sus propios mecanismos y estructuras de conocimiento. En una secuencia progresiva, de acuerdo a sus etapas de maduración, el alumno construye, modifica, enriquece y diversifica sus conceptos, normas, destrezas, actitudes y valores.

15. 

Naturaleza de los contenidos. Las diversas disciplinas, cada una según su naturaleza, deben aportar contenidos significativos que favorezcan el desarrollo integral de las personas. Para algunas disciplinas, como las científicas, lo esencial es el dominio de los conocimientos y habilidades que permitan tener acceso a la cultura e insertarse activamente en la vida de la sociedad. Para otras, como el lenguaje y la educación social, lo esencial está dirigido al desarrollo del pensamiento, las aptitudes para comunicarse con otros y las capacidades para trabajar en equipo y desarrollar proyectos comunes. En disciplinas como el arte, el alumno logra valorar el patrimonio cultural de su comunidad y oportunidades de descubrimiento y experimentación estética; por otra parte, la educación física tiende al cultivo de la salud corporal y ambiental, para que el alumno se reconozca responsable y cultive actitudes positivas para sí mismo y su entorno. En general, las disciplinas deben ofrecer a los alumnos, según las dimensiones de la persona en formación, diversas oportunidades de descubrimiento y experiencias estéticas, artísticas, físico-deportivas, científicas, culturales y sociales, junto con el reconocimiento y comprensión de la historia y la cultura de su comunidad local y nacional. Naturaleza de la pedagogía. El proceso formativo requiere de una pedagogía en la que el alumno, mediante una participación activa en su aprendizaje, descubra e incremente sus potencialidades, "haciendo surgir el tesoro que hay escondido en cada uno" (Jacques Delors. "La educación encierra un tesoro" UNESCO, 1996). La actual pedagogía debe considerar cuatro pilares fundamentales de la educación: aprender a conocer, aprender a hacer, aprender a vivir juntos y aprender a ser. Cada uno de estos cuatro pilares debe recibir una atención equivalente, a fin de que la educación sea para el ser humano una experiencia global y que dure toda la vida.

Equilibrio entre las diferentes disciplinas. Atención a las diversas dimensiones de la persona. Pilares de la educación.

16. 

3.3. PRINCIPIOS BÁSICOS DE NUESTRA PEDAGOGÍA Para responder los requerimientos hechos desde las distintas fuentes del currículum, el Colegio Teresiano sustenta sus acciones pedagógicas en los siguientes principios:

Constructivismo.

Aprender a aprender.

Diversidad de contenidos.

Método.

Personalización del aprendizaje.

Acción Evaluativa.

1. Los procesos de crecimiento personal implican una actividad mental constructiva del alumno, a través de la cual construye los significados que enriquecen su conocimiento del mundo físico y social y potencian su crecimiento personal. 2. La intervención pedagógica consiste en la creación de condiciones que favorezcan la capacidad de realizar aprendizajes por sí solo en una diversidad de situaciones. 3. Los contenidos de aprendizaje incluyen todos los aspectos de la realidad (hechos, conceptos, principios, procedimientos, normas, actitudes, valores, etc.). 4. Los contenidos educativos se ordenan temporalmente, y el resultado es un tratamiento pedagógico secuenciado que va de lo más simple y más general a lo más complejo y detallado. 5. La individualización de la enseñanza, consiste en ajustar la ayuda pedagógica a las características y necesidades educativas de los alumnos. 6. La evaluación escolar se entiende como un conjunto de procedimientos a través de los cuales se obtiene información permanente de los procesos de enseñanza y aprendizaje, tanto colectivos como individuales.

17.

3.4. EL MARCO LEGAL DEL DISEÑO CURRICULAR.  En términos de regulación del quehacer de los establecimientos respecto al currículum, las orientaciones para una nueva política educativa definida por la Ley Orgánica Constitucional de Enseñanza de 1990 consideran la flexibilidad curricular para que los establecimientos tengan la libertad de definir sus propios Planes y Programas de Estudio. Para tal efecto, el Ministerio de Educación, previa aprobación del Consejo Superior de Educación, estableció mediante los Decretos Nº40 del 24-1-1996 y Nº 220 del 18-5-1998 los Objetivos Fundamentales y Contenidos Mínimos Obligatorios para la Educación General Básica y Educación Media, respectivamente. Esto constituye el marco general dentro de los cuales nuestro Colegio ha estado elaborando Planes y Programas concordantes con el Proyecto Educativo, los que serán aplicados gradualmente en los próximos años. Aparte del marco legal expuesto en los párrafos anteriores, el Ministerio de Educación ha propuesto, a modo de orientaciones, algunos enfoques para los cambios en las propuestas curriculares de los establecimientos, las que haremos nuestras, en la medida que corresponda a las propias orientaciones de nuestro proyecto:

Es necesaria una reorientación del tipo de experiencia formativa que ofrece la educación, de modo que sea relevante y funcional para los desempeños futuros a que se dirijan los egresados.

El nuevo marco curricular procura establecer

objetivos y contenidos actualizados y conectados con la vida de las personas. A la vez, debe haber menos contenidos, pero tratados con mayor profundidad y orientados a proveer competencias de diversas dimensiones (valóricas, cognitivas, etc.) para el desarrollo integral de las personas.

La propuesta curricular (OF y CMO) busca dar una respuesta más adecuada a la simultánea necesidad de una formación común, base de la integración cultural de la nación, y mayores posibilidades de diferenciación, que respondan a la diversidad de intereses y aptitudes de los alumnos, como a la complejidad de la sociedad.

Política educacional. Proyección profesional y laboral. Competencias diversas. Formación común y diversidad de intereses.

18. 

3.5. ORGANIZACIÓN CURRICULAR  En una visión de conjunto, la estructura del currículum escolar está orientada por los fines y objetivos que se pretenden lograr en el proceso educativo. Para su formulación, hemos de identificar los requerimientos que nos hacen los distintos interesados en nuestra acción educativa. En general, nuestra principal referencia es, en sí mismo, el Proyecto Educativo del Colegio Teresiano. El Estado de Chile, a través del Ministerio de Educación ha propuesto un marco curricular que contiene los Objetivos Fundamentales (OF) y los Contenidos Mínimos Obligatorios (CMO), tanto para la Educación General Básica como para la Enseñanza Media. Dentro de ese marco curricular, que responde a las necesidades nacionales en el plano ético-moral, científico-tecnológico, cultural, social y económico, nuestra institución ha definido los Objetivos y Contenidos Complementarios que permiten, a su vez, responder a las necesidades, contexto y situaciones que son propias de nuestra comunidad.

A. Los Ciclos de Enseñanza.  

La organización del currículum responde, en primer lugar, a las características del alumno en sus distintas etapas de desarrollo. Por esta razón, hemos determinado la división en tres ciclos de enseñanza:

- Primer Ciclo : Pre Kínder, Kínder, 1º y 2º de Educación General Básica. - Segundo Ciclo : 3º, 4º, 5º y 6º de Educación General Básica. - Tercer Ciclo : 7º y 8º de EGB, y 1º, 2º, 3º y 4º de Enseñanza Media.

Cada uno de estos tres ciclos es una unidad administrativa y pedagógica, con sus propios objetivos generales de ciclo. Al término del Primer Ciclo, se espera que el alumno haya logrado lo siguiente: 1. Adquirir un conocimiento básico de su individualidad y de la comunidad inmediata donde vive.

2. Adquirir los conocimientos y habilidades fundamentales del lenguaje, para una adecuada comunicación oral y escrita.

3. Manifestar hábitos y actitudes necesarias para un buen cuidado de su higiene personal y ambiental.

4. Manifestar hábitos y actitudes necesarias para establecer armónicas relaciones interpersonales.

5. Reconocer los elementos que forman parte de su entorno natural y social, e interactuar adecuadamente con ellos.

6. Lograr un desarrollo armónico de sus capacidades físicas, intelectuales y afectivas.

7. Asimilar valores y normas propias de la Comunidad Educativa Teresiana.

8. Lograr las competencias necesarias para realizar sus trabajos con esfuerzo, perseverancia y cooperación.

19. 

Al término del Segundo Ciclo se espera que el alumno haya logrado lo siguiente: 1. Adquirir las competencias básicas para el desarrollo de un pensamiento crítico, la autonomía y la libertad responsable. 2. Descubrir su identidad personal, como hombre o mujer en desarrollo, y su posición en el mundo en relación con otros. 3. Internalizar los valores esenciales de la identidad nacional y de la Iglesia Católica. 4. Adquirir la habilidad en el manejo de las matemáticas que requiere su etapa de desarrollo, en su contexto social y cultural. 5. Adquirir esquemas conceptuales y competencias básicas del pensamiento científico y de la tecnología. 6. Adquirir habilidad en el manejo formal del idioma y creatividad en la comunicación oral y escrita. 7. Descubrir y desarrollar el sentido ético y estético de la existencia humana. 8. Consolidar como parte de su conducta los hábitos de su salud física y mental, y las actitudes para el buen cuidado de su entorno natural y social. 9. Lograr las competencias personales para actuar con fortaleza, perseverancia y espíritu colaborativo. Al término del Tercer Ciclo se espera que el/la alumno/a haya logrado los siguientes objetivos: 1. Adquirir las competencias fundamentales para vivir integrado a la sociedad y a la cultura, con autonomía, creatividad, espíritu reflexivo y libertad responsable. 2. Adquirir, a través del desarrollo integral, las competencias necesarias para seguir estudios superiores que le faculten para participar permanentemente en su propia educación. 3. Integrar en su conducta manifiesta, en sus actitudes y en su escala de valores, aquellos elementos necesarios para el buen cuidado de su salud y del medio ambiente. 4. Conocer y apreciar nuestro legado histórico-cultural; conocer la realidad nacional e internacional y valorar los elementos físicos, afectivos y espirituales de la identidad nacional y de la cultura cristiana occidental. 5. Desarrollar sus capacidades intelectuales, físicas y afectivas dentro de un marco de valores espirituales, éticos y cívicos en los que se sustente un proyecto personal de vida cristiana.

20. 

B. Áreas de Formación.  

Las áreas de formación constituyen los más amplios e importantes ejes transversales que nos dan, en primer lugar, un sentido permanente en el clima escolar, y en segundo lugar, un consenso universal respecto a los grandes fines de la educación teresiana. Nuestra propuesta pone el énfasis en un ideal trascendente de formación valórica. De este modo, aquellos aspectos relacionados con las materias pedagógicas, así como las adopciones metodológicas y los recursos didácticos, pasan a ser importantes y eficaces medios para concretizar los fines transversales y que el profesor hace parte de su intervención mediadora.

1. Área de la Afectividad. Esta Área pone énfasis en aquel aspecto del desarrollo humano referido a los

sentimientos y las emociones. Da cuenta de un proceso que se construye progresivamente a lo largo de la vida.

Un desarrollo armónico y equilibrado, desde la dimensión afectiva, implica adquirir la capacidad de: tener conciencia de los propios sentimientos y emociones y de reconocer la forma cómo ellos afectan al mundo exterior y cómo son afectados por él. Expresar los sentimientos y emociones, reconociendo su legitimidad y sopesando su potencial constructivo o negativo. Aceptar y valorar la propia existencia, con sus potencialidades y limitaciones; desarrollando una autoimagen realista y positiva. Aceptar y valorar a los otros como seres humanos esencialmente iguales, dentro de la diversidad.

Un ser humano en proceso de desarrollo, que crece seguro y confiado; que se conoce y aprende de sí y de los demás; que se siente valorado y aceptado por su entorno; que se sabe y se siente capaz, se convertirá en un adulto emocionalmente equilibrado, creativo y capaz de transformar positiva y constructivamente el mundo que le rodea.

2. Área de la Formación Cristiana. Apoyada en la fuerza y fecundidad del Evangelio, esta área de formación está

referida a "formar a Cristo en la mente y en el corazón" del ser humano. Un hombre y una mujer de fe reconoce a Cristo como centro de su vida y se reconoce a sí mismo como creatura de Dios. Integrado responsablemente en su comunidad, con pensamientos, sentimientos y actitudes evangélicas, se hace copartícipe en la instauración del Reino.

3. Área de la Ciencia y el Conocimiento. El conjunto de saberes es, a la vez, medio y fin. En cuanto fin, se justifica por el

agrado de conocer, comprender y descubrir a la persona en sí misma y al mundo en el que vive; en cuanto a medio, promueve el desarrollo de las capacidades para realizarse como persona y vivir con dignidad. El desarrollo de la razón, por el incremento del saber, estimula el sentido crítico, la autonomía de juicios, y va acompañada del despertar de la curiosidad, el desarrollo del sentido de la observación y la práctica de la experiencia objetiva o experimental. Aprender a conocer supone aprender a aprender, ejercitando la atención, la concentración y el descubrimiento profundo. También supone el ejercicio del pensamiento, articulando lo concreto y lo abstracto, la inducción y la deducción, en un proceso que se nutre en todo tipo de experiencias.

21. 

4. Área de la Salud y del Medio Ambiente. Si la educación está dirigida al desarrollo humano, es esencial una preocupación por

el cultivo de una existencia física y mental sana y en perfecto equilibrio con su entorno. El hombre y la mujer educado/a comprende, entre muchos otros hechos, que la

base de su desarrollo personal está en su equilibrio orgánico, y que el desarrollo y el estado presente y futuro de la sociedad está en relación directa con los principios de un desarrollo sustentable de la humanidad.

5. Área de la Formación Social. La dimensión social de la persona humana debiera tener dos orientaciones que son

complementarias entre sí: el descubrimiento del otro y la participación, durante toda la vida, en proyectos comunes. Teniendo como base el conocimiento de sí mismo, el hombre y la mujer educado/a debe conocer y comprender la diversidad de la especie humana y tomar conciencia de la interdependencia entre todos los seres humanos, con sus semejanzas y diferencias. La conciencia social, producto de la convivencia y de la participación responsable en grupos sociales de amplitud creciente (comunidades, pueblos, naciones...) hace estar en posesión de patrimonios culturales que entrañan valores, actitudes, competencias y conocimientos para el cuidado del bien común, la construcción de la paz en el mundo, la convivencia democrática, la solidaridad y la justicia. El conocimiento adquirido durante la educación técnica o profesional debe complementarse, durante toda la vida, con un comportamiento social adecuado, la aptitud para crear y trabajar en equipo, la capacidad de iniciativa, la promoción de buenas relaciones interpersonales y la participación en proyectos comunes. 6. Área de las Humanidades.

Lo que llamamos área de las humanidades incluye los aspectos del desarrollo que tienen que ver con el enriquecimiento del mundo interior desde la experiencia viva del lenguaje, la filosofía y el arte.

El lenguaje como propio de la naturaleza del ser humano, da sentido a la experiencia creadora y al crecimiento del mundo interior con referencia al conocimiento de la verdad en la comunicación humana. El arte desarrolla la sensibilidad ante la belleza más allá del conocimiento, favoreciendo con ello las experiencias emotivas del hombre y la experiencia del proceso creador junto con el lenguaje. La filosofía, junto con el arte y el lenguaje en sus múltiples formas interiores y expresiones desde y hacia la realidad, constituye la experiencia metafísica y psicológica para la comprensión y creación de los valores de la existencia humana más allá de la racionalidad empírica.

22. 

C. Sectores de Aprendizaje.  Como complementos a las áreas de formación de la persona, los sectores de aprendizaje son categorías del trabajo pedagógico más concretas. Cada uno de los sectores agrupa un conjunto de saberes (conceptos, habilidades, procedimientos, actitudes...) y tipos de pensamientos que es necesario desarrollar en pos de los fines educativos y que requieren por parte del profesor y del alumno un estilo de trabajo específico. Atendiendo a nuestro concepto de educación integral, hemos ordenado nuestro diseño curricular en los siguientes sectores de aprendizaje, que vienen a ampliar la propuesta oficial del Ministerio de Educación:

- Lenguaje - Matemática - Ciencia - Tecnología - Artes - Educación Física - Religión - Orientación - Teología y filosofía - Comunidad y trabajo

En la práctica pedagógica, cada sector es concretizado en subsectores, asignaturas y en actividades sistemáticas, que dan cuenta de un trabajo específico para cada ciclo o nivel escolar. El subsector o clase de actividad sistemática viene a constituir un núcleo centralizador de metodologías, medios pedagógicos e intervención del profesor, y a la vez constituye una clase de tareas o campo de saber que el alumno debe asumir en su proceso de desarrollo.

D. La Evaluación Escolar.  

La evaluación es concebida como una parte integralmente incorporada en el proceso de enseñanza-aprendizaje. Constituye una valiosa fuente de información que permite verificar la calidad de la acción educativa y tomar decisiones respecto a los factores pedagógicos que intervienen en el desarrollo grupal e individual de los alumnos. Según los principios del aprendizaje significativo como construcción en permanente crecimiento, la evaluación debe adquirir tres formas básicas: inicial, formativa y final. La evaluación inicial estudia los esquemas de conocimientos previos que son necesarios para el nuevo contenido o situaciones de aprendizaje. Se preocupa del inicio de una nueva fase y sus herramientas principales son la consulta e interpretación de la historia escolar del alumno y la interpretación de sus comportamientos o respuestas a las nuevas situaciones. La evaluación formativa o intermedia explora los progresos, dificultades o bloqueos del proceso de enseñanza-aprendizaje. Consiste en la observación sistemática de la totalidad de eventos que durante él ocurren. La evaluación final o sumativa mide los tipos o grados de aprendizajes logrados al término de una fase, unidad o ciclo de enseñanza. Consiste en la observación, registro e interpretación de los comportamientos y competencias del alumno respecto a las situaciones que se han definido previamente para esa fase o ciclo. La evaluación final da origen a una calificación que permite tomar decisiones pedagógicas en términos de promociones, refuerzos o nivelaciones individuales dentro de los niveles escolares.

 23.

4. ESTRUCTURA Y ORGANIZACIÓN DE LA         COMUNIDAD EDUCATIVA 

4.1. ORGANIZACIÓN ADMINISTRATIVA GENERAL. 

  El Colegio Teresiano Enrique de Ossó pertenece a la Compañía de Santa Teresa de Jesús, quien delega la dirección y gestión general del Colegio en una de sus religiosas. La organización del Colegio es la siguiente: (ver organigrama en anexo 1)

A. Dirección:  La Directora es el representante de la Corporación en la organización educativa. Este rol lo asume una Hermana de la Compañía. Vela por la fidelidad de ésta a las orientaciones de la Iglesia, a los objetivos de la Compañía de Santa Teresa de Jesús y a la Misión Institucional. Le corresponde la animación de toda la Comunidad Educativa, favoreciendo un clima de libertad, respeto, participación y confianza. Coordina todo el proceso organizacional del Establecimiento para el desarrollo del Proyecto Institucional. Lidera la toma de decisiones y la resolución de problemas y conflictos. Representa a la Institución y establece comunicación con organismos oficiales públicos y privados. Puede delegar sus funciones cuándo y en quien estime conveniente.

B. Áreas Estratégicas:  

        1. Área de Desarrollo Organizacional.   Le corresponde a esta Área todo lo relacionado con la convivencia, la disciplina, el orden, la formación de hábitos en los alumnos. Es la encargada de coordinar todas las actividades intergrupales del Colegio y administrar las medidas necesarias para que se cumplan los objetivos institucionales. Tiene relación con esta Área el apoyo Técnico- Logístico a las otras áreas. Le compete también la implementación de sistemas de comunicación hacia todos los niveles y/o estamentos, así como representar al Establecimiento ante organismos oficiales, y establecer relación y comunicación con otras instituciones educativas. Es la responsable de contactarse con el Ministerio de Educación y de cursar toda la documentación oficial del Colegio.          2. Área de Desarrollo Académico. A esta Área le compete configurar la práctica de la enseñanza y el proceso de aprendizaje de los alumnos, de acuerdo a las interpretaciones técnico-pedagógicas que se deriven de los principios y políticas del currículum, formulados en el Proyecto Educativo Institucional.

24.  

En esta Área estratégica se interpretará el valor de los componentes pedagógicos del currículum y, bajo criterios y formas de diseño y acción curricular, se configurarán las áreas de enseñanza-aprendizaje, los estilos de conducción, los planes y programas, las orientaciones metodológicas, los criterios y técnicas de selección de medios educativos, la ordenación y utilización de los recursos de enseñanza y aprendizaje, los equipos pedagógicos de gestión, los planes de perfeccionamiento docente, los proyectos de innovación pedagógica y los criterios y procedimientos de evaluación de procesos y resultados pedagógicos de la Institución. Le compete al Área, por lo mismo, asesorar a los docentes en el diseño e implementación de sus prácticas de enseñanza, de modo que, con la autonomía profesional correspondiente, se concreticen, principalmente, los programas, las metodologías, la evaluación escolar y todos aquellos aspectos organizativos del trabajo de enseñanza según los contextos donde el profesor hace efectivo el currículum.         3. Área de Desarrollo Personal. Le compete el diseño, ejecución y evaluación de acciones sistemáticas que apunten al desarrollo personal del alumno. Para el desarrollo de su gestión, el Área coordina sus acciones, principalmente con las Áreas estratégicas de Desarrollo de la Fe y Desarrollo Académico, aportando criterios curriculares desde los elementos teóricos de la Orientación Educacional y de la Psicología Evolutiva. Es responsabilidad del Área, el estudio y análisis de las problemáticas sociales, institucionales y/o familiares que afectan el desarrollo personal armónico de los alumnos. Proponer estrategias de solución preventivas y remediales, a nivel grupal e individual, involucrando a todos los estamentos pertinentes y especialmente a la familia.        4. Área de Desarrollo de la Fe. Le corresponde animar e incentivar a los distintos estamentos que forman la Comunidad Educativa para ir haciendo realidad el compromiso de vivir con autenticidad el cristianismo con el sello propio de la Espiritualidad Teresiana: CRISTOCÉNTRICA, MARIANA, ECLESIAL. Esta Área favorece en cada persona el crecimiento de la fe encarnada en la historia para lo cual ayuda a CONOCER Y AMAR A JESÚS; a través de la vivencia de los Valores Evangélicos, la interiorización de la espiritualidad de Santa Teresa de Jesús y de San Enrique de Ossó. Propicia la vida sacramental y la oración Teresiana, especialmente en el Cuarto de Hora de Oración. En la dimensión apostólica promueve especialmente el compromiso solidario a través de Proyectos de Acción Social hacia los más necesitados.

Favorece instancias de crecimiento en la fe, de acuerdo a las diferentes necesidades. Por ser parte de su misión promover el diálogo entre FE - VIDA - CIENCIA, se

propicia la formación en valores a través de la permeación transversal del currículum. Es así como esta Área asesora desde su campo la acción educativa y pedagógica buscando que todo lo que en el Colegio se realice esté orientado hacia la formación de Hombres y Mujeres capaces de transformar el mundo por la vivencia auténtica de su fe.

25.  

5. Área de Administración y Recursos. Le corresponde dinamizar los procesos administrativos y contables, que sirven de apoyo y son facilitadores de la labor educativa del Colegio. Específicamente establece la coordinación y apoyo con las otras Áreas, en cuanto a la definición y priorización de necesidades que surjan como producto de la implementación de sus acciones.

C. Consejos:  

1. Consejo Directivo: Es el organismo destinado a asesorar a la Dirección en la determinación de las políticas de desarrollo y en la toma de decisiones estratégicas. Este organismo está integrado por: - Directora. - Coordinador/a Área de Desarrollo Organizacional. - Coordinador/a Área de Desarrollo Académico. - Coordinador/a Área de Desarrollo Personal. - Coordinador/a Área de Desarrollo de la Fe. - Coordinador/a Área de Administración y Recursos. La Directora quien preside el Consejo Directivo, podrá incorporar al Presidente del Centro de Padres, a un representante del profesorado y al Presidente del Centro de Alumnos, cuando lo estime conveniente. Este organismo sesiona ordinariamente una vez por semana. Toma acta un miembro designado. 2. Consejo General de Profesores: Es un organismo asesor de la Dirección; está constituido por todos los docentes directivos y docentes propiamente tales. Su objetivo principal es la optimización del proceso educativo.

D. Comité de Ciclo:  El Comité de Ciclo es un organismo coordinador de las acciones educativas, dirigidas al Ciclo. Está integrado por un representante de las siguientes Áreas Estratégicas: Desarrollo Organizacional, Desarrollo Académico, Desarrollo Personal y Desarrollo de la Fe. Actúa con autonomía y creatividad, principalmente a nivel de programación y ejecución, dentro del marco de respeto por los lineamientos emanados del nivel de planificación general, el cumplimiento del Plan Anual y los procedimientos organizacionales vigentes. Promueve la co-responsabilidad de las distintas Áreas en el logro de los Objetivos Estratégicos de cada una de ellas, sin desmedro del hecho que cada Área es la principal responsable de su trabajo específico. Desarrolla su trabajo en un clima de comunicación, participación, colaboración y coordinación de sus integrantes, orientado hacia el logro de los objetivos institucionales. Es convocado y presidido por el Coordinador del Ciclo. Sesiona ordinariamente en reuniones semanales y, extraordinariamente a solicitud de cualquiera de sus miembros, cuando la importancia y urgencia de los asuntos a tratar lo amerite.

26.  

E. Organismos Colaboradores:  

1. Centro de Alumnos: Es la organización formada por los estudiantes del 3º Ciclo (7º a IVº Medio). Se rige

por su propio reglamento. Su finalidad es servir a sus miembros, en función de los propósitos del

establecimiento y dentro de las normas de organización escolar, como medio de desarrollar en ellos el pensamiento reflexivo, el juicio crítico y la voluntad de acción; de formarles para la vida democrática, y de prepararlos para participar en los cambios culturales y sociales.

Promueve la creación e incremento de oportunidades para que los alumnos manifiesten democrática y organizadamente sus intereses, inquietudes y aspiraciones.

Presenta los problemas, necesidades y aspiraciones de sus miembros ante las autoridades u organismo interno que corresponda. 2. Centro de Padres y Apoderados: Es un organismo que representa a los Padres y Apoderados ante la autoridad del Establecimiento. Se rige por sus propios estatutos y reglamentos. Vincula estrechamente la familia con el Colegio y colabora a través de sus miembros en la implementación del Proyecto Educativo. Apoya y colabora con la labor del Establecimiento y estimula la cooperación y participación de toda la Comunidad Educativa en éste. Programa y patrocina ante las autoridades del Colegio iniciativas en beneficio de la educación de los alumnos.  

 

 

 

 

 

 

 

 

 

   

 

27.