problemas de la etica y moral

7
PROBLEMA DE LA LIBERTAD La vida es como un viaje que hacemos a una dimensión espacio-tiempo y luego deberíamos poder retornar a casa. Mientras tanto, la condición de humanos nos condena en este mundo a ser libres. Desde el punto de vista de la filosofía oriental, el hombre, antes de nacer elige a sus padres, su familia y su destino, de modo que desde ese contexto, la vida del hombre es entregarse sin condiciones para cumplir su destino. Por lo tanto el hombre está determinado desde el nacimento por su destino. Erich Fromm, en su libro “El miedo a la libertad” nos dice que la naturaleza humana es el producto de la evolución del hombre, y que a medida que progrese como individuo único y distinto en su proceso de individuación tanto más tenderá a unirse a los demás con amor, porque entenderá su lugar en el mundo. Así como el bebé consigue una vez que crece separarse de su madre y ser independiente, así el hombre social logrará su independencia de los lazos que lo atan al mundo exterior y sus condicionamientos, que le otorgan seguridad y sentido de pertenencia. El proceso de individuación; le permitirá la genuina relación con los otros y la naturaleza, sin privarlo de su individualidad. Cuando una persona se transforma en un individuo se siente, sola y angustiada y puede optar por someterse a otros con tal de sentirse incluido. Pero hay una mejor forma de evitar el sentimiento de aislamiento que no sea alienarse en los otros; que es el amor y el trabajo creativo. El proceso de individuación necesita de la fuerza interior y de la integración de la personalidad individual que de lugar a una intimidad y solidaridad con los otros, superando los mecanismos de evasión que se ponen en juego en todos aquellos que aún no lo logran. El instinto es un impulso que disminuye a medida que evoluciona la escala zoológica. El hombre se libera de los instintos y adquiere libertad para obrar libre de determinismos. Queda expuesto a la libertad de acción y esa aparente debilidad con respecto a especies inferiores es lo que hace posible la cultura humana. El hombre registra los mismos estímulos pero puede elegir entre distintas formas de respuestas que lo obligan a pensar. Modifica la naturaleza que es parte de él, porque en lugar de una adaptación pasiva puede crear nuevos instrumentos para dominarla; y esta posibilidad, lo separa de ella. Se da cuenta de la dimensión trágica de su existencia, ser parte de la naturaleza y no obstante poder trascenderla. El destino trágico del hombre y su relación con la libertad está representado simbólicamente en el mito de la creación del mundo. El hombre es expulsado del Paraíso por querer elegir libremente. Renuncia a vivir en el Jardín del Edén en completa armonía con la naturaleza sin sufrir ninguna privación para realizar un acto libre que le ocasiona toda clase de sufrimientos. Este hecho representa un símbolo del comienzo de la humanidad. Esta separación del hombre como especie es similar a la separación del hombre como individuo de su madre. El proceso de individuación como especie es lento, mientras tanto el hombre se siente aislado e inseguro con respecto a su papel en el universo y al significado de su vida. El camino del hombre individualizado y su integración con el mundo históricamente ha estado lleno de espinas, llevándolo a someter su

Upload: angelaayllonalbino

Post on 06-Nov-2015

2 views

Category:

Documents


0 download

DESCRIPTION

Etica y Moral

TRANSCRIPT

PROBLEMA DE LA LIBERTAD

La vida es como un viaje que hacemos a una dimensin espacio-tiempo y luego deberamos poder retornar a casa. Mientras tanto, la condicin de humanos nos condena en este mundo a ser libres.Desde el punto de vista de la filosofa oriental, el hombre, antes de nacer elige a sus padres, su familia y su destino, de modo que desde ese contexto, la vida del hombre es entregarse sin condiciones para cumplir su destino. Por lo tanto el hombre est determinado desde el nacimento por su destino.Erich Fromm, en su libro El miedo a la libertad nos dice que la naturaleza humana es el producto de la evolucin del hombre, y que a medida que progrese como individuo nico y distinto en su proceso de individuacin tanto ms tender a unirse a los dems con amor, porque entender su lugar en el mundo.As como el beb consigue una vez que crece separarse de su madre y ser independiente, as el hombre social lograr su independencia de los lazos que lo atan al mundo exterior y sus condicionamientos, que le otorgan seguridad y sentido de pertenencia. El proceso de individuacin; le permitir la genuina relacin con los otros y la naturaleza, sin privarlo de su individualidad.Cuando una persona se transforma en un individuo se siente, sola y angustiada y puede optar por someterse a otros con tal de sentirse incluido.Pero hay una mejor forma de evitar el sentimiento de aislamiento que no sea alienarse en los otros; que es el amor y el trabajo creativo.El proceso de individuacin necesita de la fuerza interior y de la integracin de la personalidad individual que de lugar a una intimidad y solidaridad con los otros, superando los mecanismos de evasin que se ponen en juego en todos aquellos que an no lo logran.El instinto es un impulso que disminuye a medida que evoluciona la escala zoolgica. El hombre se libera de los instintos y adquiere libertad para obrar libre de determinismos.Queda expuesto a la libertad de accin y esa aparente debilidad con respecto a especies inferiores es lo que hace posible la cultura humana.El hombre registra los mismos estmulos pero puede elegir entre distintas formas de respuestas que lo obligan a pensar.Modifica la naturaleza que es parte de l, porque en lugar de una adaptacin pasiva puede crear nuevos instrumentos para dominarla; y esta posibilidad, lo separa de ella. Se da cuenta de la dimensin trgica de su existencia, ser parte de la naturaleza y no obstante poder trascenderla.El destino trgico del hombre y su relacin con la libertad est representado simblicamente en el mito de la creacin del mundo.El hombre es expulsado del Paraso por querer elegir libremente. Renuncia a vivir en el Jardn del Edn en completa armona con la naturaleza sin sufrir ninguna privacin para realizar un acto libre que le ocasiona toda clase de sufrimientos.Este hecho representa un smbolo del comienzo de la humanidad. Esta separacin del hombre como especie es similar a la separacin del hombre como individuo de su madre.El proceso de individuacin como especie es lento, mientras tanto el hombre se siente aislado e inseguro con respecto a su papel en el universo y al significado de su vida.El camino del hombre individualizado y su integracin con el mundo histricamente ha estado lleno de espinas, llevndolo a someter su individualidad, y a transformar su libertad en una pesada carga, porque lo hace dudar de ella y a involucrarse en un tipo de vida que carece de significado y direccin.

EL PROBLEMA DE LA LIBERTAD DE NUESTRA VOLUNTAD

"El hombre es libre de hacer lo que quiere; pero no de querer lo que quiere" Schopenhauer1.El planteamiento filosfico de la libertad de nuestra voluntad tiene como fin averiguar si sta procede o acta necesariamente obligada, o sea, determinada, impulsada por antecedentes a realizar sus actos, o bien si acta sin sta determinacin, sin estar obligada. En otras palabras, si se determina a si misma y por si misma, aun en contra de los antecedentes y aunque se oponga a ellos; si lo hace porque quiere, porque ella decide, porque ella elige, porque ella es "arbitro de su accin"2.En otro aspecto; cabe aclarar que como la esencia de la voluntad es el querer, y querer es preferir, el hombre no se halla arrastrado por sus tendencias, si no que se halla frente a ellas, en un continuo preferir o descartar. A su vez, lo que el hombre quiere se convierte en un elemento integrante de su propia realizacin. El querer no deja intacta la vida humana, sino que la va constituyendo en un carcter. No se puede querer siempre lo que se quiere, si no lo que se puede querer. Y lo que se puede querer puede cultivarse hasta llegarse a un dominio de si mismo, o puede angostarse hasta llegar a una esclavizacin de si mismo. El dominio de si, que es producto del cultivo, hasta el mximo de la posibilidad de querer, es la libertad. Esta no aparece desde afuera como un postulado tico, si no que surge desde dentro, como caracterstica de la voluntad. La libertad se halla fundada en la volicin y; como la volicin es tendente, se halla a si mismo fundada en las tendencias, las cuales no constituyen un obstculo para su libertad, si no que son la condicin que la hace posible.Para Kant, la libertad de nuestra voluntad consiste en poder producir efecto sin ser determinada por ninguna cosa que no sea ella misma. Adems, destaca el aspecto moral de la voluntad; dice as que, la voluntad es autnoma cuando da origen a la ley moral y no se halla subordinada a prescripciones dependientes de fines ajenos a ellos. Este seria el sentido primario y mas importante de la voluntad, a la cual Kant, denomina buena voluntad. En cambio, para Fichte, la libertad se ejerce a travs de la voluntad pura, y aclara que, sta no solamente vence los obstculos, sino que inclusive los crea para vencerlos.A continuacin, pasaremos a desarrollar el problema planteado en un principio, la eterna batalla entre deterministas e indeterministas.

LOS PROBLEMAS DE LA JUSTICIA

El primero de ellos, es el eterno desfase existente entre el volumen de asuntos que se tramitan al ao y el nmero de Juzgados que han de tramitarlos. Siempre crece a ritmo mucho ms rpido el nmero de asuntos, mientras que nunca aumenta en la misma proporcin el nmero de Juzgados. Eso es as desde que tengo uso de razn El segundo problema est en la ridcula dotacin presupuestaria del Ministerio de Justicia que, desde siempre, es la "hermana pobre" de la Administracin Pblica. El da en que Justicia tenga los mismos medios humanos, tcnicos y presupuestarios que la Inspeccin de Hacienda, tendremos una Justicia moderna. Mientras tanto, nos tendremos que conformar, en pleno siglo XXI, con una Justicia decimonnica.El tercer problema reside en el desfase tecnolgico que sufren los Juzgados, comparados, por ejemplo, con la Banca Privada o con la Hacienda Pblica. Por no tener, los Juzgados espaoles no tienen ni una direccin de correo electrnico que est disponible, no ya al pblico en general, sino para abogados, fiscales o procuradores. Y, no hablemos de la posibilidad de consultar el estado de los expedientes a travs de Internet.El cuarto problema nos lo encontramos en la dispersin de Organismos (evidentemente incompetentes) que "meten sus sucias manos" en este pastel: Ministerio de Justicia, Comunidades Autnomas con esa competencia transferida y Consejo General del Poder Judicial. Al final, los unos por los otros y la casa sin barrer. Por ejemplo: llevamos ms de tres aos esperando a que entre en funcionamiento un programa que permita incorporar a los ordenadores de los Juzgados los documentos electrnicos que aportemos los abogados fiscales o procuradores por va electrnica. Pues bien, a estas alturas de Internet, hoy es el da en que seguimos esperando a que el Ministerio, las CCAA que tienen transferidas las competencias de Justicia y el CGPJ se pongan de acuerdo en cmo debe ser ese programa. Que yo sepa, el programa slo est en fase de pruebas en Len, patria chica de ZP, y en Zaragoza, de donde es, curiosamente, el Presidente del Consejo General de la Abogaca Espaola, Sr. Carnicer. Al paso que vamos, eso llegar al resto de Espaa, Dios mediante, en el prximo siglo.El quinto problema es de recursos humanos, y paradjicamente, la culpa la tienen los Jueces, los Secretarios Judiciales y el resto de personal adscrito a las Oficinas Judiciales. Me explico. Desde siempre, es el personal de los Juzgados el que absorbe el aumento de la litigiosidad mediante el aumento de horas de trabajo, ya sea en casa o en el juzgado (y hablo con conocimiento directo de tema). Han aceptado trabajar a base de incentivos por productividad y, con ello, hemos conseguido tener muchas sentencias, s, pero muchas de ellas redactadas con excesiva prisa y muchas ms pendientes de ejecutar, cuando lo ideal es tener buenas sentencias, aunque sean pocas, pero ni una ms; y que sean el Ministerio, las CC.AA. y el CGPJ los se pongan las pilas para que haya, cada ao, ms Juzgados y mejor dotados, en funcin del aumento de la litigiosidad.Hasta que no se solucionen todos esos problemas, y alguno otro que no cito para no aburrir, la Justicia en Espaa ir como puta por rastrojo, dando tumbos al socaire de los vientos que soplen el Ministerio, en las CC.AA. y en el CGPJ. Y todo lo dems sern vanos intentos de cambiar la mierda de sitio, en lugar de limpiar la porquera.Y, como decimos los sufridos letrados, este es mi parecer, que someto a cualquier otro mejor fundado.

LA DIGNIDAD HUMANA, UN VALOR FUNDAMENTAL

En la filosofa moderna y en la tica actual se propaga una subjetivizacin de los valores y del bien. Desde David Hume, existe una corriente de pensamiento que se expresa en la idea de que no es posible derivar ningn tipo de deber a partir del ser de las cosas. El paso siguiente nos lleva a concluir que por valores entendemos nuestras impresiones, reacciones y juicios, con lo cual convertimos el deber en un fruto de nuestra voluntad o de nuestras decisiones.En el positivismo jurdico tipo Kelsen el derecho es el resultado de la voluntad de las autoridades del estado, que son las que determinan aquello que es legalmente correcto - y legtimo - y lo que no lo es. En tica, el positivismo y el empirismo afirman que bueno y malo son decisiones meramente irracionales o puro objeto de impresiones o reacciones, o sea, del campo emocional. Tanto en el positivismo como en el empirismo existe an, es verdad, la idea de valores, pero slo como una idea subjetiva o como objeto de consenso. El acuerdo por ejemplo de un grupo o de un pueblo crea los valores.

En realidad esto conduce a un relativismo total. As por ejemplo, el grupo podra acordar que los judos no son seres humanos o que no poseen dignidad, y que por tanto se los puede asesinar sin miedo a castigo alguno. Para esta teora no existe ningn fundamento que se base en la naturaleza de las cosas y cualquier punto de vista puede adems variar de una a otra poca. No existe ninguna barrera segura de valores frente a la arbitrariedad del estado y el ejercicio de la violencia. Sin embargo, el propio conocimiento y la apertura natural a los dems nos permite reconocer en ellos y en nosotros el poder de la inteligencia y la grandeza de la libertad. Con su inteligencia, el hombre es capaz de trascenderse y de trascender el mundo en que vive y del que forma parte, es capaz de contemplarse a s mismo y de contemplar el mundo como objetos. Por otro lado, el corazn humano posee deseos insaciables de amor y de felicidad que le llevan a volcarse - con mayor o menor acierto- en personas y empresas. Todo ello es algo innato que forma parte de su mismo ser y siempre le acompaa, aunque a veces se halle escondido por la enfermedad o la inconsciencia. En resumen: ala vez que forma parte del mundo, el hombre lo trasciende y muestra una singular capacidad - por su inteligencia y por su libertad - de dominarlo. Y se siente impulsado a la accin con esta finalidad. Podemos aceptar por tanto que el valor del ser humano es de un orden superior con respecto al de los dems seres del cosmos. Y a ese valor lo denominamos "dignidad humana".

La dignidad propia del hombre es un valor singular que fcilmente puede reconocerse. Lo podemos descubrir en nosotros o podemos verlo en los dems. Pero ni podemos otorgarlo ni est en nuestra mano retirarselo a alguien. Es algo que nos viene dado. Es anterior a nuestra voluntad y reclama de nosotros una actitud proporcionada, adecuada: reconocerlo y aceptarlo como un valor supremo (actitud de respeto) o bien ignorarlo o rechazarlo. Este valor singular que es la dignidad humana se nos presenta como una llamada al respeto incondicionado y absoluto. Un respeto que, como se ha dicho, debe extenderse a todos los que lo poseen: a todos los seres humanos. Por eso mismo, an en el caso de que toda la sociedad decidiera por consenso dejar de respetar la dignidad humana, sta seguira siendo una realidad presente en cada ciudadano. An cuando algunos fueran relegados a un trato indigno, perseguidos, encerrados en campos de concentracin o eliminados, este desprecio no cambiaria en nada su valor inconmensurable en tanto que seres humanos. Por su misma naturaleza, por la misma fuerza de pertenecer a la especie humana, por su particular potencial gentico - que la enfermedad slo es capaz de esconder pero que resurgir de nuevo si el individuo recibe la teraputica oportuna -, todo ser humano es en s mismo digno y merecedor de respeto.La dignidad, o cualidad de digno, deriva del adjetivo latino dignus y se traduce por valioso. Hace referencia al valor inherente al ser humano en cuanto ser racional, dotado de libertad y poder creador, pues las personas pueden modelar y mejorar sus vidas mediante la toma de decisiones y el ejercicio de su libertad. Valricamente se tiende a afirmar que el ser humano posee dignidad por s mismo, no viene dada por factores o individuos externos, se tiene desde el mismo instante de su fecundacin o concepcin y es inalienable (ver: ley natural).

LA SOLIDARIDADLa solidaridad nace del ser humano y se dirige esencialmente al ser humano. La verdadera solidaridad, aquella que est llamada a impulsar los verdaderos vientos de cambio que favorezcan el desarrollo de los individuos y las naciones, est fundada principalmente en la igualdad universal que une a todos los hombres. Esta igualdad es una derivacin directa e innegable de la verdadera dignidad del ser humano, que pertenece a la realidad intrnseca de la persona, sin importar su raza, edad, sexo, credo, nacionalidad o partido.La solidaridad trasciende a todas las fronteras: polticas, religiosas, territoriales, culturales, etc. Para instalarse en el hombre, en cualquier ser humano, y hacer sentir en nuestro interior la conciencia de una familia al resto de la humanidad.La solidaridad implica afecto: la fidelidad del amigo, la comprensin del maltratado, el apoyo al perseguido, la apuesta por causas impopulares o perdidas, todo eso puede no constituir propiamente un deber de justicia, pero si es un deber de solidaridad.Un anlisis del concepto del valor de la solidaridad nos ofrece los siguientes componentes esenciales:1 Compasin: porque la solidaridad es un sentimiento que determina u orienta el modo de ver y acercarse a la realidad humana y social, condiciona su perspectiva y horizonte. Supone ver las cosas y a los otros con los ojos del corazn, mirar de otra manera. Conlleva un sentimiento de fraternidad, de sentir la empata por el dolor de los otros.de sentir la empata por el dolor de los otros.2 Reconocimiento: no toda compasin genera solidaridad, slo aquella que reconoce al otro en su dignidad de persona. La solidaridad as tiene rostro, la presencia del otro demanda una respuesta.3 Universalidad: La desnudez del rostro, la indefensin y la indigencia es toda la humanidad y simboliza la condicin de pobreza de esfera intimista y privada.

HECHO MORAL

Hecho moral es todo acto calificable moralmente realizado por una persona de forma libre, consciente y voluntaria que tenga una incidencia social.Si alguna de estas caractersticas faltara o no seria un hecho moral o no se podra juzgar moralmente. 1. Calificable moralmente : ... Que adquiere sentido moral desde una norma establecida, es decir, sea susceptible de aprobacin o condena moral.... Que sea un acto sujeto a la sancin de los dems (aprobacin o condena) de acuerdo con una norma moral existente. Si existe una norma moral desde la cual podemos calificarlo positiva o negativamente.Se excluyen de entre los posibles aquellos que:... No pudieron ser evitados. ... Tuvieran consecuencias imprevistas. En el ejemplo, si haciendo el amor con un amigo ste fallece de un ataque al corazn. 2. Exige de los individuos que sea realizado :... Su decisin sea libre, es decir :a- Habiendo distintas alternativas. En el ejemplo, existe la alternativa de tener relaciones y la de no tenerlas.b - Pudiendo elegir entre ellas, es decir, si puede elegir realizar cualquiera de las alternativas existentes. En el ejemplo, seran las circunstancias concretas de su vida las que determinaran si podra elegir o no entre tenerlas o no.... Su decisin sea consciente. Se excluyen aquellos casos en los que el hecho se realiza:a- De forma inconsciente. Por ejemplo revelar un secreto en un lapsus, sin querer.b- Habiendo perdido la conciencia. c- Faltndole la conciencia. Es el caso de los enfermos mentales, no tienen interiorizado - no tienen conciencia de- los cdigos morales. 3. Su decisin sea voluntaria : ... Es decir que sea realizado por conviccin ntima y no de un modo exterior e impersonal.... Un hecho moral no tiene el mismo valor cuando la persona lo realiza porque quiere y lo desea que cuando lo realiza por miedo a los dems o por moda.

CUL ES LA DIFERENCIA ENTRE UN ACTO MORAL Y UNO TICO?

se puede cometer un acto tico y a la vez inmoral? o viceversa? existen actos moralmente reprensibles y ticamente aceptables?Slo los actos entran en el plano de lo "moral" y slo las reflexiones entran en el plano de la ticaUn "acto" slo puede ser moral (o inmoral). La reflexin en torno a su moralidad o inmoralidad es "tica". La tica del utilitarismo, por ejemplo, valorar algo como "moralmente bueno" si ello implica felicidad o ausencia de dolor, incusive si eso significa la muerte de otra persona, algo as como el fin justifica los medios.Dos ejemplos: Jonh Stuart Mill pone el caso de "matar en defensa propia" y Berttrand Russell el de una tripulacin de un barco pirata. En este ltimo, hay acciones obligadas y acciones prohibidas, acciones loables y acciones reprobables. Un pirata tiene que mostrar valor en el combate y justicia en el reparto del botn; si no lo hace as, no es un buen pirata. Cuando uno hombre pertenece a una comunidad ms grande, el alcance de sus obligaciones y prohibiciones se hace ms grande; siempre hay un cdigo al cual se ha deajustar bajo pena de deshonra pblica. Las acciones son "morales"; los "cdigos" son ticos.Desde hace 300 aos a la fecha (y ms especficamente luego de Kant) moral y tica no son sinnimos (ver "Fundamentacin metafsica de las Costumbres" y "Crtica de la Razn Prctica", ambas obras de I. Kant)