presentación, la pedagogía que supone la expe. de dios
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PEDAGOGÍA DE LA EXPERIENCIA DE DIOS - Dra. Catalina PerdomoTRANSCRIPT
Experiencia de DiosAhondar en el descubrimiento de los
Diversos caminos de la Experiencia de Dios y la pedagogía
Que esta supone.
Catalina Perdomo
La Pedagogía del Deseo
El deseo resulta ser decisivo en la búsqueda de Dios
Existe un estrecho vínculo entre desear a Dios y la misma experiencia de Dios.
El “saber” de la experiencia, significa una situación donde la persona queda comprometida con su deseo.
Grandes maestros de la espiritualidad cristiana han empleado el término deseo como la metáfora central de la búsqueda humana de Dios.
La Pedagogía del Deseo
El deseo en la vida del hombre
El ser humano es un “ser de deseos”
Una Doble
dimensión
Nos puede
ayudar a descubrir lo mejor
de nosotros.
Es inestable
y confuso, el mundo
de los deseos.
El mundo de los
valores.
PARA TENER EN CUENTA
Es importante saber distinguir el deseo propio interno de aquellos otros deseos que surgen por el deber o factores culturales o que son meras fantasías y veleidades.
La Pedagogía del Deseo
El deseo en la vida del hombre
Dónde se sitúan
Afectividad
Cómo influyen
El papel de la sensibilidad
Estar atentos a los contenidos gratificantes
Potenciación del deseo
PARA TENER EN CUENTASi queremos que nuestros deseos maduren a
través de un proceso de crecimiento hacía el verdadero amor, superando todo egocentrismo, debemos estar atentos a todos aquellos contenidos que nos resulten gratificantes, tienen una gran influencia en nuestra afectividad.
No se da el verdadero amor sin la potenciación intima del deseo, hasta llegar al descentramiento. La forma de amor oblativo en la plenitud de la entrega a los demás, es la cualidad extrema del deseo.
La Pedagogía del DeseoEl deseo humano de
Dios“El hombre es un ser con un misterio en su corazón que
es mayor que él mismo”
El deseo radical. La imagen que Dios
ha grabado en nosotros.
¿Desde dónde desea el hombre a Dios?
PARA TENER EN CUENTA
Que el deseo de Dios esté en el horizonte de todos los demás deseos.
Debemos estar vigilantes en todos esos mecanismos que ponen en movimiento, todo aquello que nos mueve a mantenernos en deseos que nos son gratificantes, que en muchas ocasiones se nos convierten en un fin, quedando atrapados en nuestra libertad interior.
La Pedagogía del Deseo
Es Dios mismo, quien ha suscitado en el hombre el deseo de encontrarse con Él.
La sed de Dios en el hombre no se sacia con ideas ni con palabras, sino con la experiencia.
Dios tiene sed de que el hombre tenga sed de Él.
Dios desea ser deseado por el hombre
PARA TENER EN CUENTA
Cuando el hombre descubre que es inmensamente deseado por Dios, es cuando el deseo de Dios alcanza su más intenso dinamismo.
La Pedagogía del Deseo
El deseo en la vida cristiana
Un “SER”
Un “ESTAR”
Con CRISTO
El deseo siempre
está ORANDO
¿Cuándo duerme
tú oración?
Cuando se enfría el deseo
PARA TENER EN CUENTA
San Juan de la Cruz, expresa lo siguiente: “Que vuestra ocupación sea el deseo”; y afirma: “Toda la vida de un buen cristiano es un santo deseo”.
San Agustin también nos habla sobre el deseo en la vida cristiana y los relaciona con la oración, identificando el deseo de Dios con la oración.
La Pedagogía del Deseo
Polivalencia del deseo humano
Necesidad de discernimiento
Una sabia pedagogía orientada hacia un proceso formativo
para aprender a “desear según el deseo de Dios”. ¿Qué se requiere para
esto?
La Pedagogía del Deseo
Una radical conversión que oriente al hombre hacía Dios.
Deseo de Dios y
conversión
Qué
hay
que
tener
en
cuenta
La imagen que tenemos de Dios
Qué es el pecado
Qué es la conversión
PARA TENER EN CUENTANo puede darse un verdadero deseo de Dios si no
se pone en marcha una conversión de nuestros deseos.
CómoEl primer paso en este proceso es dejar atrás aquellos deseos que hemos vivido, y tenemos la experiencia de que no han sabido darnos la felicidad. Siempre se debe renunciar a algo si se quiere dar.
Es el camino del descentramiento del yo, para abrirnos a Dios y a los otros.
La Pedagogía del Deseo
Descubrir lo que verdaderamente podemos desear
Una sabia pedagogía debe tomar como punto de partida la realidad misma del deseo humano,
como una orientación existencial.
PARA TENER EN CUENTA
No se trata de mirar cómo reprimir o incluso encausar las aspiraciones del corazón; sino más bien, cómo podemos aclarar lo ilusorio de nuestros deseos y mostrar la verdadera dirección de los mismos, es decir, lo que verdaderamente podemos desear.
La Pedagogía del DeseoAyudar a desear según el deseo de
Dios
El objetivo de la educación cristiana del deseo es ayudar a desear “según el deseo de Dios”, haciendo nuestro su deseo, como lo hizo Jesús.
PARA TENER EN CUENTA
Esto supone abrazarnos y reconciliarnos con nuestros deseos, conocerlos y ponerles nombre, de manera que podamos encauzarlos hacía una orientación de fondo, integrándolos en un Deseo Mayor; es el deseo plenamente identificado con la voluntad de Dios.
La Pedagogía del Deseo
Diversas situaciones en el cristiano vocacionando con respecto al deseo de Dios.
El deseo de Dios, sea más o menos intenso, más o menos implícito.
El deseo de Dios se vaya personalizando, y haciéndose cada vez más intenso, profundo, gozoso y plenificante.
Es normal que…
La Pedagogía del Deseo
Diversas situaciones en el cristiano vocacionando con respecto al deseo de Dios.
Sin embargo, por diversos factores como por ejemplo, factores ambientales presentes en una comunidad o grupo formativo, el deseo de Dios se vaya debilitando o se vaya reduciendo en pequeños deseos, muy por debajo del alto vuelo de un gran deseo de Dios.
QUÉ PUEDE SUCEDERPueda que esos pequeños deseos sigan diciendo de Dios, pero tan lejano y diluido, que lo lleva a una especie de “instalación espiritual”, en donde ya no se manifiesta un creciente progreso hacía Dios.
Puede llegar a encontrarse enredado por una situación de vivida por una dispersión de deseos, sin que el deseo de Dios unifique y reoriente el complejo mundo de sus deseos.
QUÉ PUEDE SUCEDERPuede darse también, el “extravío” del verdadero deseo de Dios a través de un estilo de vida que lo contradice; supuestamente se desea a Dios por el camino de Jesús; pero sin seguir su estilo de vida. Se desea el evangelio, pero sin tomar en serio sus consecuencias concretándolas en la vida.
Puede suceder que se dé el caso de alguna vocación en la que está muriendo su ilusión vocacional porque: ¿En realidad nunca había nacido o si la hubo no fue suficientemente cultivada?
La Pedagogía del Deseo
Dios: protagonista de la pedagogía del deseo humano de Dios.
Solamente Dios puede suscitar y dar plenitud a los deseos más profundos del corazón humano.
El deseo de Dios en el hombre es suscitado por el Espíritu, el cual nos lleva a identificarnos con los
deseos mismos de Jesús.
PARA TENER EN CUENTA
Hay la necesidad de ir recorriendo un camino o peregrinaje de renuncias a deseos que nos alejen del verdadero deseo. Pero hay que ser consciente de que ese peregrinaje no podemos realizarlo sino contamos con la fuerza que únicamente puede venir del él.
Tiene que darse una pedagogía del deseo que nos entrene para dejar atrás todo aquello falsea y lo vaya orientando hacía su más profunda verdad.
La Pedagogía del Deseo
La actual “cultura del deseo” y su posible influencia en una vocación
Busca su satisfacción en
lo concreto.
Presentados como el camino para situarse en
un mundo diferente.
Son ofrecidos como la puerta que nos abre a una felicidad.
Cifrada en conseguir un reconocimiento social o sentirse queridos.
El poder es capaz de
producir lo que el corazón desea.
La Pedagogía del Deseo
Elementos que integran una educación del deseo
•El descentramiento de nuestro yo a través de la ascesis de abnegación
•Cultivar el deseo explícito y creciente
•Perseverancia, humildad confiada y amor
El cristianismo es una invitación para que el ser humano se libere del deseo egocéntrico.
La Pedagogía del DeseoMedios para la educación del
deseoEn el ámbito personal
Un discernimiento de nuestros deseos.
Buscar liberarla de todos aquellos obstáculos que impiden.
Hay que buscar formas de oración que afecten la sensibilidad.
Ejercicios espirituales de san Ignacio como un elemento primordial en el discernimiento de nuestros deseos y ellos son una auténtica escuela o pedagogía del deseo.
La Pedagogía del Deseo
Medios para la educación del deseo
El acompañamiento de un “maestro” que ilumine y oriente nuestra vida espiritual.
Todo aquello que nos puede aportar la misma vida.
Contextos vitales y culturales que hagan brotar y crecer el deseo de Dios.
Los medios del entorno
Jesús, maestro y educador del deseo de
DiosSin él, nada
podemos hacer
Jesús es quien reorienta y sana el dinamismo denuestros deseos.
Es quien nos hace capaces de realizar el paso de la esclavitud de nuestros deseos egoístas a los grandesdeseos de comunión con Dios y de solidaridad fraternas con el prójimo.
Es el mejor “entrenador” del deseo liberándonos del amor egoísta,y abriéndonos a la aventura de dejarnos conducir por el Espíritu a través de los caminos del Reino.
Jesús, maestro y educador del deseo de
DiosÉl, es el punto de referencia obligado y la fuentede agua viva de la sed de nuestro deseo que saltahasta Dios.
Cuando Jesús habla de la abnegación, está llamandoa dejar atrás los caminos de nuestros deseos equivocadosy defendernos de la seducción de los falsos fetiches que nosofrece la sociedad.
Seguir a Jesús es la manera de movilizar lo mejor de nuestrosdeseos.
Se trata de ir haciendo con él, el camino de adhesión a su persona.
Su llamada al seguimiento es una invitación a “estar” con él para irensanchando el horizonte de nuestros deseos hasta desear según “el deseo de Dios”compartiendo su mismo deseo.
Jesús, maestro y educador del deseo de
Dios
Sigamos a Jesús, para que él viva en nosotros sudeseo de Dios y se convierta en el único objetivo
de nuestra vida.
GraciasCatalina Perdomo