poesia y teatro infantil
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República Bolivariana de Venezuela
Ministerio del Poder Popular Para la Educación Universitaria Instituto Universitario de Tecnología Industrial
“Rodolfo Loero Arismendi” I.U.T.I.R.L.A
Extensión Maturín
Poesía y Teatro Infantil
Prof.: Bachilleres Ismeria Oca María Viloria C.I.: 7.334.039
Laurimar Meléndez C.I.: 16.176.051 5NF
Julio 2013
INDICE
Contenido Pág.
Introducción 1
Conceptualización de poesía 2
Misión de la poesía 3
Delimitación como genero 3
La poesía y las fases del crecimiento 3
Características formales 4
La poesía y los otros géneros y formas literarias 5
El niño y el poeta 5
Teatro infantil 6
El teatro infantil y sus diferentes aspectos 7
Modalidades de teatro para niños 8
Otras características 9
El teatro y el niño 13
importancia 14
Conclusión 15
Bibliografía 17
INTRODUCCIÓN
La poesía infantil es el arte de la palabra destinada a los niños, dirigida a la
enseñanza y la ética que es entendida como un arte. La poesía infantil por su
propia naturaleza está relacionada con otras manifestaciones y actividades
artísticas más complejas. Por ejemplo, se conecta con la música y el ritmo; con el
teatro y la escenificación.
El teatro infantil es una disciplina artística más compleja que el teatro en
general, si bien es un sector del mismo. Comparte elementos del teatro para
adultos, pero tiene sus propias mecánicas de funcionamiento.
El teatro se ha convertido en una gran herramienta de aportes invalorables.
De una forma inmediata y amena, conecta al niño con el mundo del arte y le abre
las puertas de la sensibilidad estética, de la reflexión, de la capacidad de
emocionarse, reírse y llorar, de comprender diferentes visiones y realidades de la
vida y del mundo. Abre las puertas al conocimiento, a la cultura y a historias sin
fronteras. Al mismo tiempo que el teatro invita a los niños al pensamiento y a la
reflexión, también los atrae a la diversión.
El teatro es un lenguaje que trabaja con la literatura, la música, la pintura, la
danza, el canto y el mimo. A través de esos elementos, una buena obra de teatro
produce admiración, excitación y deseo de volver a verla
Poesía y Teatro infantil
Conceptualización de poesía
El concepto de poesía infantil comprende al menos tres clases de obras: los
textos escritos por niños y adolescentes; escritos para ellos, como una clase de
lector modelo (según el concepto de Umberto Eco y la estética de la recepción); o
los que la tradición literaria ha considerado adecuados para ellos. En el segundo
sentido, y sobre todo cuando se requiere la precisión, es frecuente hablar también
de poesía para niños.
La poesía para niños es un juguete sonoro y colorido que nace del pequeño
universo que rodea al infante y se vuelve danza, vuelo, flor. Es la fórmula por la
que el niño penetra al mundo de la luz y el color, pero aun despojada de su ámbito
sensorial puede seguir multiplicando sueños, porque es tintineo, imagen, canción.
Tal vez, porque como aseveraba Juan Ramón "debe ser como una estrella
que es un mundo y parece un diamante"
La poesía para niños debería ser arcoíris, lenguaje que despierta en las
sílabas asombrado de pájaros y soles, un transformador de la piedra en ave, de la
sed en río, de la palabra en canto, "poesía que si no se canta, podría cantarse"
(Gabriela Mistral).
El poema, hacedor de claridades, memorioso de sueños, vencedor de
razones y tiempos y silencios, es conciencia del goce, del dolor, del pensamiento.
"No es un espejo en el que nos contemplamos, sino un destino en el que nos
realizamos" (Octavio Paz), y es precisamente de esa proposición del arte a la vida
que surge nuestra permanencia. Una permanencia que se inicia en el ritmo y la
rima del poema infantil.
El poema es un camino por el cual el adulto puede llegar a la infancia y todo
el material que ella reciba será devuelto con una nueva significación. El poeta es
el emisor que plantea un código y el niño el receptor que lo decodifica a través de
una actitud activa: la comunicación. Por eso entendemos con Rafael Olivares
Figueroa, que infantil es una poesía no porque está dirigida a los niños, "sino
porque está impregnada de esencias infantiles, y a veces sólo por su acento, por
su gracia, por su ingenuidad, por su leve sabor de cosa primitiva, porque no se
trata de descifrar la poesía sino de sentirla"
Misión de la poesía
Aunque conlleva un fin en sí misma, desempeña un papel más importante
porque intenta que el hombre vuelque su mirada hacia las estrellas, recobre el
encanto de la fantasía y regrese al lenguaje del amor y la belleza.
Delimitación como género
Aunque puede ser considerada una variedad de la poesía en general, lo
más habitual ha sido que se la considerara un género de la literatura para niños.
La importancia de esta categorización no radica en sí misma, sino en el hecho de
que, en el segundo caso, ha sido frecuente que se incorporaran al género
aspectos no literarios que no se exige a la poesía en general pero se entienden
imprescindibles para los niños, como la moral y la voluntad pedagógica.
Dentro de la polémica literaria general de la escritura entendida como arte
por el arte o como vehículo de comunicación política, social o ética, la poesía para
niños ha tendido a decantarse con claridad hacia el segundo campo. Ejemplo de la
primera opción puede ser un autor como Eduardo Polo, en la tradición
hispanoamericana, o el Dr. Seuss, en la anglófona; de la última, no hay que olvidar
que entre los primeros clásicos figuran textos tan deliberadamente educativos
como las fábulas de Samaniego o Tomás de Iriarte.
La poesía y las fases del crecimiento
Se ha afirmado que la poesía es un género natural en los niños, puesto que
en su forma más sencilla la experimentan desde las canciones de cuna. También
se ha destacado que el elemento lúdico de la poesía es muy cercano al proceso
de aprendizaje del lenguaje. Aparte de estas consideraciones teóricas, desde el
campo de la sociología de la literatura se constata que es un género muy
frecuente en los primeros años de la infancia, escaso en los últimos y casi ausente
de la adolescencia (cuando se retoma bajo otras formas, por lo general de tema
amoroso).
Entre los autores que han escrito para adolescentes podemos citar a Ana
María Fernández Martínez (Amar e outros verbos) o Juan Carlos Martín Ramos
(Poemamundi), ambos de tendencia reflexiva, así como Miquel Desclot, en
catalán, Antonio García Teijeiro, en gallego, y más recientemente Aurelio
González Ovies, en asturiano y en castellano.
Características formales
La poesía infantil suele asociarse, en la tradición hispanoamericana, con la
métrica estudiada (regular y breve, o cantarina, en imitación de melodías) y un uso
muy frecuente de la rima (mayoritariamente, de la consonante). Los ejemplos son
muy numerosos: Mirta Aguirre, Efraín Barquero, Germán Berdiales, Carmen
Conde, Carlos Lapeña (con la recuperación del género de los ovillejos, como
rasgo más notable), Carlos Murciano, Ana María Romero Yebra, Celia Viñas,
María Elena Walsh (autora que además ha dedicado una especial atención al
limerick), etc. No se trata de un formalismo, sino de un eco de las coplas,
cuartetas, canciones y fábulas en verso tradicionales. Sin embargo, la misma
tradición utiliza el uso de métricas y rimas imperfectas; en el caso de España, el
ejemplo más conocido es el de Gloria Fuertes y sus improvisaciones; esa forma
más laxa es la que emplea también Juan Carlos Martín Ramos o el siempre
sorprendente José A. Ramírez Lozano. Antonio A. Gómez Yebra ha prestado
especial atención a un género de forma indeterminada, aunque por lo general
dado a los paralelismos y las estructuras regulares (métricas o no), como el de las
adivinanzas.
Es mucho menos habitual el uso de formas sin embargo frecuentes en la
poesía moderna, desde el siglo XX, como el haiku; en el caso de las formas
breves han destacado Juan Kruz Igerabide o Jairo Aníbal Niño. Otra corriente
poco numerosa experimenta con el verso libre, como por ejemplo Ayes Tortosa o,
para un público adolescente, Ana María Fernández.
La poesía y los otros géneros y formas literarias
La poesía infantil y la narrativa se cruzan con poca frecuencia. Es poco
habitual que se escriba poesía narrativa o épica, y cuando se hace suele rehuirse
de forma clara el componente heroico, como en Los visigordos, de José Ramírez
Lozano, o La vieja Iguazú, de Darabuc. Más extraño aún es que se creen poemas
en prosa para niños, aun a pesar de que la tradición ha adscrito al género Platero
y yo, de Juan Ramón Jiménez.
La relación de la poesía infantil y el teatro es más habitual. Por un lado, el
teatro en verso es más frecuente en el caso del público infantil que en el de
adultos, donde hoy ha quedado relegado a la revisión de los clásicos o a la
experimentación; es así porque, sobre todo combinado con el humor y la sorpresa,
es una forma muy eficaz (además de muy tradicional, por ejemplo, en el teatro de
títeres. Por otro lado, son numerosos los poemas aislados que adoptan forma
dialogada. En general es una forma expresa, visible como tal; autores como
Marisa López Soria han experimentado con la incorporación de voces de forma
tácita. En algunos casos excepcionales, todo un libro puede escribirse para dos
voces, de forma que exige ser recitado teatralmente; así lo ha hecho por ejemplo
Paul Fleischmann
El niño y el poeta
El lenguaje infantil tiene una estructura fonológica, semántica y
morfosintáctica igual que el lenguaje adulto, y aunque está construido con
elementos similares, el habla infantil tiene modelos diferentes. Para lograr la
comunicación deberán ser auténticos, concretos, dinámicos, directos y
coherentes, y sin embargo el niño ama la fantasía y el despliegue de metáforas
que de pronto no comprende en forma cabal, pero se transforman en estímulo de
su fantasía y un descubrimiento de insoslayables sonoridades
Teatro infantil
El concepto de teatro infantil comprende al menos tres clases de obras: los
textos escritos por niños y adolescentes; escritos para ellos, como una clase de
lector modelo (según el concepto de Umberto Eco); o los que la tradición literaria
ha considerado adecuados para ellos. En el segundo sentido, y sobre todo cuando
se requiere la precisión, es frecuente hablar también de teatro para niños.
Ésta es una rama de las artes escénicas, que consiste en la representación
o actuación de historias frente al público, usando para estos fines el habla, gestos,
la mímica, la danza, la música y otros elementos.
El teatro es un género literario, ya sea en prosa o en verso, normalmente
dialogado, concebido para ser representado.
Consiste para el actor en presentar y contar una historia al espectador, en
exponer ante él una ficción o una presentación de lo real con ayuda de su voz, de
su rostro y de su cuerpo.
La etimología de la palabra teatro es del griego theatron que significa lugar
para ver o lugar para contemplar.
El teatro es un elemento de formación artística del niño/a, pero contribuye
igualmente a su formación intelectual, favorece la expresión verbal y gestual, y
hace crecer las capacidades de observación, reflexión e imaginación.
Es una actividad lúdica porque se trata de jugar a representar algo que
inventa o imita en el momento de realizarlo.
El teatro infantil y sus diferentes aspectos
- El argumento: La trama debe ser sencilla, adaptada a la comprensión del
niño para que éste capte fácilmente el contenido y el mensaje de la obra. Se debe
preferir hechos y personajes del mundo circundante, asimilados a las experiencias
infantiles, trasmitido con lenguaje adaptado a la edad.
- Los decorados: Deben ser sencillos de colores vivos, con armonía y de
buen gusto en la elección de formas y colores. Se deben evitar elementos que
distraigan la atención del nudo de la acción. Se estimula en mayor grado de
fantasía del niño cuanto menos sean los detalles en los decorados. La riqueza
escenográfica debe estar dada por la capacidad artística en cuanto a la mímica,
entonación, voz y actitudes del actor. Lo más importante de la escenografía es que
sea funcional, que facilite y acompañe el movimiento escénico.
- El vestuario: Es la cubierta del actor. Los personajes deben tener
elementos que los caractericen de acuerdo con su rol. Con pocos detalles se
puede ubicar al niño en la caracterización de cada personaje, pues él con su
imaginación y sus sentimientos, colabora en la comprensión, completando lo que
falta.
- Los personajes: Éstos pueden ser humanos, animales y fantásticos. Los
niños se identifican y proyectan a través de ellos haciendo propias escenas
representadas, por tal motivo debe cuidarse que los roles
estén bien definidos y caracterizados en cuanto mímica, vestimenta, voz y
desplazamiento, es preferible la aparición de pocos personajes para facilitar la
compenetración de los niños con los mismos.
- Los recursos: Los recursos a utilizar son varios, la música es fundamental
a esta edad. Los trozos musicales pueden ejecutarse con instrumentos, cintas
grabadas, discos compactos, para enfatizar secuencias, ambientar, bailar, cantar,
como fondo de alguna acción de suspensos, etc.
-La presentación: Son varios los elementos que hay que tener en cuenta
para conseguir un espectáculo.
1. Conocimiento del público al que irá dirigido: Debe tenerse en cuenta
la edad de los niños; la educadora tiene la posibilidad de saber cómo
son y cómo reaccionan sus niños.
2. Los factores que intervienen en la representación frente al público
son: La magia, la fantasía, lo verdadero, lo simple, lo honesto, lo
sencillo, lo ameno, lo fácil, lo directo, encerrado en ritmo ágil y alegre,
para que el resultado sea el momento de esparcimiento feliz.
3. Lugar: En donde se verificará la representación. Interior o exterior.
Los diferentes enfoques que ello demande. Tanto en los recintos
interiores como exteriores se aconseja que no sean muy amplios, en
caso de serlo se procurará prolongar la escenografía hacia el público.
Además, de acuerdo con el argumento, pueden utilizarse múltiples recursos
sonoros y visuales con el fin de brindar mayor realismo a la acción, tales como
efectos luminosos, sonidos de vientos, sirenas, rugidos, entre otros.
Modalidades de teatro para niños
Hay dos modalidades de teatro para niños: por interiorización y por apropiación
-Teatro para niños por interiorización: se trata de obras creadas
especialmente para el niño, teniendo en cuenta las condiciones de la cultura
infantil, operando el niño como espectador implícito.
-Teatro para niños por apropiación: son las obras creadas sin tener en
cuenta al público infantil, pero que son adoptadas por los niños, por un fenómeno
de recepción, como el caso de “Los viajes de Gulliver” de Jonathan Swift, o “Don
Quijote de la Mancha” de Miguel de Cervantes Saavedra.
El concepto de teatro infantil comprende al menos tres clases de obras:
- Los textos escritos por niños y adolescentes
- Los escritos para ellos
- Los que la tradición literaria ha considerado adecuados para ellos
En el teatro están presentes:
- Un conjunto de agentes creadores: Directores, actores, autores, escenógrafos,
músicos, vestuaristas, maquilladores, adaptadores, traductores.
- Un conjunto de agentes y organismos de gestión: Los empresarios, las salas, los
representantes, los jefes de prensa, los encargados de publicidad, los abogados,
los editores.
- Un conjunto de agentes/instituciones legitimantes: Los premios, la prensa, los
concursos, los festivales y ferias, las universidades y centros de estudio, los
padrinos artísticos, las revistas y librerías especializadas, museos, bibliotecas,
academias y asociaciones.
- Un caudal de público y/o lectores: Es la masa variable de espectadores y
lectores.
Otras Características Del Teatro Infantil
El teatro infantil, llamado por algunos teatro para niños, refleja la vida que
rodea a los pequeños por medio de personajes que actúan en un tiempo y espacio
determinados, los cuales tienen que estar muy cercanos a la infancia. La mayor
parte de las veces, los personajes de estas obras son animales, plantas, muñecos
que hablan y ríen, que actúan y representan para los pequeños espectadores.
De esta forma, los niños sienten más cercanas las situaciones que se dan
en la obra, y reciben lo nuevo de manera agradable y comprensible. Como todo lo
que se pone a su alcance, cuando se les presentan obras teatrales se pretende
algo concreto: entretenerlos e influir favorablemente en su educación. Por eso la
obra que se vaya a representar debe ser seleccionada con cuidado especial. En
tal sentido, el teatro infantil es un adecuado medio para introducir a los niños en la
esfera de las emociones y los sentimientos.
El teatro no dicta leyes éticas ni estéticas, pero muestra de modo elocuente
cómo se organiza y se pone de manifiesto la conducta humana en la vida
cotidiana.
Es necesaria una aclaración: Algunos autores se preguntan si existe
realmente el teatro infantil. Unos opinan que sí y otros que no. Si se plantea que el
teatro para niños ha de reunir características especiales, teniendo en cuenta
aquellos a quienes va dirigido, se puede afirmar que existe un teatro infantil.
Existe, y tiene sus propias características. La fantasía no solo se la
proporciona el tema o el argumento. Puede estar presente en el vestuario, en las
acciones, en el ambiente. Estas obras de teatro para niños pequeños deben tener
las siguientes características:
- Naturalidad: Todo lo que se presenta debe estar exento de afectaciones y
de exageraciones.
- Sencillez: Las ideas deben expresarse de forma sencilla, para que los
sentimientos y las emociones sean interiorizados por los niños.
- Claridad: Si las ideas se expresan con oscuridad, en expresiones que
ofrezcan duda o confusión, no llegan a los pequeños, no cumplen su cometido.
Por eso todas las ideas, las opiniones, los deseos, los
sentimientos de los personajes deben expresarse con la mayor claridad, tanto en
su contenido como en la forma.
- Amenidad: Esto se debe lograr tanto en el argumento, como en la temática
o en la forma de reflejarla. Es imprescindible tener en cuenta a aquellos que
disfrutarán la obra, y reflejar algún hecho, algún suceso, que les resulte ameno y
atraiga su atención.
- Brevedad: Si se presenta una obra demasiado extensa o con muchos
personajes, los niños y niñas se aburren, se confunden o se cansan
intelectualmente y no prestan atención.
- Interés: Sólo cuando la temática, los personajes, las acciones que se
presentan tienen en cuenta al espectador, resultarán interesantes para él. Por eso
los temas deben estar siempre muy cerca de la vida infantil.
- Fantasía: Logra siempre despertar el interés. Es un elemento de gran
importancia y significado para los niños.
Hay otros aspectos que se deben tener presente:
- El lenguaje: Debe ser correcto, claro, preciso, comprensible, acorde con la
edad de estos niños.
- El contenido: Debe responder a los intereses propios de la edad. Esto se
puede lograr con los personajes: juguetes y animales preferidos, plantas, etc.
- El mensaje: Siempre debe ser positivo. Éste puede ser de contenido ético,
estético, intelectual, pero siempre tiene que estar presente el mensaje positivo.
- La acción: Es recomendable que trascurra con secuencia lógica, que no
vaya de un asunto a otro, sino que se relacione con una idea o asunto central que
esté presente de principio a fin. Sin embargo, puede ocurrir que un personaje que
actúa incorrectamente comprenda el error que comete y cambie su actitud. Aun
cuando el cambio sea brusco, los niños lo asimilan, pues sucede lo que muchos
de ellos desean, sobre todo cuando el personaje que actúa mal les resulta
simpático.
En cuanto a los personajes, en obras para la primera infancia deben ser
pocos. Dos o tres a lo sumo, y deben estar bien caracterizados, tanto física como
moralmente, actuando en concordancia con sus cualidades. No es necesario que
el personaje «malo» sea feo; los infantes solo le otorgarán esta característica,
porque no todo lo feo de la realidad es malo, ni todo lo bello es bueno.
Cada personaje debe, además, poseer su timbre, su voz propia, que es
invariable de principio a fin de la obra, y debe estar de acuerdo con aquél a quien
representa. No será nunca igual la voz de una mamá que la de un niño; no será
nunca igual la «voz» de un perro adulto, a la de un perrito, etc. Cuando se
presenta una obra teatral, con las características referidas, a los niños y niñas de
la primera infancia, se pretende cumplir con ellos algunos objetivos:
- Introducirlos en ese medio contradictorio, maravilloso y lleno de
movimiento que los rodea.
- Enseñarles a orientarse en ese medio.
- Enseñarles a observar que las personas tienen sus propias características
y que son iguales o diferentes en sus maneras de ser y actuar.
- Enseñarles a criticar las malas acciones y a solidarizar con las buenas.
- Favorecer el desarrollo de su lenguaje e influir en el de su pensamiento.
- Ponerles en relación con los hábitos y costumbres de la vida que los
rodea.
- Educarles en los sentimientos morales positivos.
- Favorecer su educación estética.
- Enseñarles a observar algo detenidamente.
- Favorecer el desarrollo de la imaginación, la memoria y la atención.
El teatro y el niño
Desde los primeros años de la vida, es recomendable que los niños se
relacionen con pequeñas obras de teatro. De esta forma comienzan a surgir los
primeros sentimientos éticos y estéticos. También se favorece el desarrollo de su
oído, la formación de su capacidad de atención. Muchas veces, ellos recuerdan
acciones o expresiones de los personajes y los emplean en su lenguaje propio, lo
que desarrolla no sólo esta esfera de su capacidad intelectual, sino también su
memoria.
Cuando la niñez de la primera infancia se acostumbra a ver obras de teatro,
aprende a ser buen oyente, a comportarse en público y a conservar los buenos
modales en cualquier lugar, todo lo cual favorece su educación. Los niños son
fantasiosos, y la fantasía está presente en toda obra de teatro, por lo que soñando
y viendo sus sueños reflejados en el mundo ficticio de los personajes, ellos sacian
su curiosidad de conocer y comprender mejor la vida de las personas, la vida que
los rodea. Es lógico que los pequeños se interesen por el teatro con la misma
fuerza que se interesa por las narraciones.
En muchas ocasiones, ellos escuchan un cuento y se imaginan cómo son
los personajes y el medio en que se desenvuelven sus vidas; todo esto lo ven en
la escena. El teatro es para los niños el mundo que ellos desean, ese mundo en el
que siempre triunfan las buenas acciones, los buenos son premiados y los malos
castigados, ese mundo en el que el trabajo proporciona bienestar.
Al presenciar una obra de teatro, extraen de ella aquello que su propia experiencia
les ofrece en la vida diaria, aquello que se relaciona con sus intereses y
movimientos.
Importancia
El teatro infantil es importante desde todos los puntos de vista. Es capaz de
despertar las fibras más sensibles y de influir en la formación de sus sentimientos.
Cuando un niño o niña de la primera infancia presencia una obra de teatro
aprende a través de varios aspectos:
- Por el contenido
- Por la dicción de los personajes
- Por la actuación
- Por el mensaje
- Por los movimientos
- Por el vestuario
- Por las costumbres que se ponen de manifiesto
Las tareas que se les plantean a los creadores de teatro para niños no son
nada fácil, en nada se diferencian de las que tienen ante sí los que crean cuentos
y poesías. Ellos tienen una gran responsabilidad. Deben plasmar cosas que
eduquen y a la vez resulten interesantes, que reflejen la vida y el trabajo de los
individuos, etc.
La obra teatral puede ser un puente entre la vida y los infantes. Para lograr
esto, se ha de tener presente lo siguiente: el teatro tiene que estar lleno de
bondad, reflejar lo mejor de las personas, hablar de victorias, ansias, sacrificios, o
principios morales, sin perder en fantasía.
CONCLUSIÓN
Aunque a veces se nos olvide, la poesía es un género infantil primordial
para los pequeños, que juega con la musicalidad y el humor, que estimula la
imaginación y la sensibilidad. Además la poesía infantil está presente en la
formación de los niños desde que son apenas unos bebés.
Hay que dejar que la poesía entre en las bibliotecas de los niños. Hay que
Aprenderla con ellos, jugar a recitarlas. Entonces la poesía es una herramienta
perfecta para ejercitar la memoria de los niños. Las rimas hacen más fácil la
memorización del texto, y recitar poemas mejora la expresión corporal y la dicción.
También la poesía infantil puede ser percibida por los pequeños como un
juego. Inventar versos, continuar poemas o simplemente recitarlos, es una
actividad divertida que implica a los pequeños y les hace partícipes del proceso
creativo. Al igual que las canciones infantiles, los poemas que los niños aprenden
y cantan son parte de su rutina de juegos. La poesía aumenta el vocabulario y su
capacidad perceptiva. Los niños acostumbrados a escuchar poesía desarrollan
más su creatividad, captan mejor lo que ven a su alrededor, tienen una mirada
más sensible hacia las cosas que le rodean. La poesía ayuda a comprender
situaciones emocionales complejas, mejorando su crecimiento interior.
Por supuesto, al igual que las narraciones, los poemas tienen que ser
adecuados a la edad del niño, aunque, al mismo tiempo, muchos poemas tienen
varios niveles de lectura. Adaptémonos a la edad de nuestro hijo a la hora de
interpretarlos.
Es importante que así como se les debe enseñar poesía a los niños, estos
no deben ser llevados al teatro solamente para que no estén todo el día
entregados a la tecnología. El teatro les abre las puertas a la creación, al cuento y
a la historia. Las experiencias del sentido, de la atención, visión, y auditivas,
aportan una riqueza artística y cultural a los niños. Existen diferentes tipos de
obras infantiles.
Los cuentos clásicos, las obras musicales, las distintas danzas, son algunos
de los estilos que ofrece el teatro infantil y seguramente los niños se sentirán más
atraídos por una o por otra. El teatro hace con que el niño ejercite su propio
pensamiento al esforzarse para entender lo que quiere decir la obra. La mejor
edad para empezar a llevar a los niños al teatro es a partir de los 3 o 4 años.
Al principio, ellos tendrán dificultad para entender lo que se quiere decir en
la obra. Cuando son muy pequeños, es recomendable que antes de llegar al
teatro, les expliquemos cómo es el teatro, qué obra verán, los actores y en qué se
difiere el teatro de la televisión o del cine, por ejemplo. A medida que van
creciendo, los niños se van enterando más.
Lo importante es que llevar a los niños a ver, siempre, una obra que está
dirigida hacia su edad, y así lograr un interés y una atención adecuados.
BIBLIOGRAFÍA
http://artesescenicas.byethost15.com/teatro/el-teatro-infantil.htm
http://www.guiainfantil.com/400/el-teatro-infantil-y-los-ninos.html
http://es.wikipedia.org/wiki/Teatro_infantil
http://www.cuentoalavista.com/2011/02/la-importancia-de-la-poesia-en-
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http://www.slideshare.net/Claudialcz/c-la-poesia-en-el-aula-de-preescolar
http://www.mlggb.com/publicacion.php?id=9
http://es.wikipedia.org/wiki/Poes%C3%ADa_infantil
http://letras-uruguay.espaciolatino.com/puentes/poesia_mundo_infantil.htm