poesÍa de tristeza de sabra y eurÍdice canova libro 4

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POESÍA DE TRISTEZA

DE SABRA Y EURÍDICE CANOVA LIBRO 4

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POEMAS DE SABRA

- SILENCIA MI ECO -ANTAÑO TU ENTREGA...

PRECIPICIOS ETERNOS -¡SIN TI UNA VIDA!

-SOL TARDÍO -FALSOS HÉROES

-ALGUIEN… -SIN AURORAS...

-SENTIMIENTO EXILIADO ¡AHÓGATE EN TU SOLEDAD!

-TU ADIÓS -¡LA SOMBRA MAS HERMOSA!

POEMAS DE EURIDICE CANOVA

- EL FRUTO DE MI DESTIERRO -NO TE DEJARÉ CAER

-SI HE DE MORIR QUE SEA HOY -LA MÚSICA ES LA VOZ DE MI TRISTEZA

-BUSCA UNA PALABRA DE AMOR -HE DE RENACER EN ESTA PRIMAVERA

-CUANDO SE MUERE LA NOCHE -PUEDO CANTARLE AL AMOR... EL INFIERNO DE LA OSCURIDAD

-ALGÚN DÍA REGRESARÉ... -HE AMANECIDO...

-NO EXISTE EL AMOR SIN DOLOR

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SILENCIA MI ECO

Cuando el alma divaga es que llora soledad, y el paso silente se convierte en suspiro; por la vía indecisa de la efímera verdad... negado el desamor, desfigurado el retiro.

Avanzar a campo abierto es perder la huella,

tu río se seca en esta duna sin retorno; el vuelo de las aves oscurece la centella... opacando la vida fértil de todo entorno.

Hasta el frondoso árbol yace sin esperanza,

a sus pies la tumba del amor vencido; ese palacio lejano fue hogar y bonanza... con su luna ferviente, el dolor es sentido.

Si alguna vez escucharas éste mi lamento,

mi traje sería un velo de estrellas graciosas; ni tules ni sedas trenzarían el filamento...

esplendorosas mariposas volarían gloriosas.

Silencia el magro eco que resuena perdido, devuelve a mi espalda la esbelta postura;

activa en mi corazón el firme y gran latido porque te amaré siempre... ¡Con o sin locura!

ANTAÑO TU ENTREGA...

Mis añoranzas divagan en solitario, prendidas al saco raído del tiempo;

Qué mejor luz que la que emana lenta. Qué mejor paz que la de esta luna atenta.

Vacío eterno de la pradera agreste,

el lamento perece al filo de la noche; Qué mejor verso rompe en tus labios. Qué mejor poema bordado por sabios.

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De espaldas transito entre penumbras, mis ansias soportan esta desolación;

Qué mejor ruego que aquel desesperado. Qué mejor canción que la de un enamorado.

Y tú gobiernas el paraíso intermitente,

con tu magna esencia y sorprendente luz; Qué mejor negrura que la de un halcón.

Qué mejor eco resonando en ésta mi razón.

Ensimismado es el viento creciendo tardío, lejana figura del amor esfumado en mi fuero;

Qué mejor entrega la que antaño nos alimentaba. Qué mejor horizonte el de tu todo... ¡Y el de mi nada!

PRECIPICIOS ETERNOS

Mi dolor carcome este corazón mío, lo deja sensible en su gran palpitar;

elegiste el abandono de mi respirar... pena silenciosa avanza en este estío.

Raro sufrimiento que no me permite reír,

no ceja esta red de piel esperanzada; calla la locura de toda quimera soñada... detiene la ligera ternura en su devenir.

Desapareciste del espejo impaciente,

oscuros parajes recorres sin mi clamor; borraste la imagen que saciaba tu ardor...

sólo un marco vacío en reclamo incipiente.

Trote cargado de rocío que sujeta y calma, huella sinuosa en el largo túnel del olvido; mis gritos lastimeros rebotan sin sentido... derribaste paredes de mi arrugada alma.

Cierro mis ojos cansados de mirar inviernos, alud de asperezas corroídas sin magna razón;

mi mano agito liberando toda desazón... mi adiós se desbarranca entre precipicios eternos.

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¡SIN TI UNA VIDA!

Sin ni siquiera saber que tú existías me fui despacio de esta vida

sin ni siquiera saber que me querías lentamente sufrí una eterna agonía.

Nunca apareciste ante mi imagen

deteriorada y esfumada como un suspiro nunca apareciste en el espejo que miro

me liberaste lentamente del ser que admiro.

Ojalá te hubiese encontrado en mi camino en mi peregrinar errático por esta vida

ojalá te hubiese soñado un instante ojalá te hubiese querido cual fiel amante.

Ya no te tendré jamás en mi retina

no me darás mieses, no me darás caricias no me darás anhelos ni me darás delicias que llenen este vacío enorme de esta...

mi efímera vida...

SOL TARDÍO

Sol tardío que no quiere desaparecer, para no dormir el eterno olvido

mar de silencios, castillo derruido... intensa añoranza de gris atardecer.

Rozan la orilla siluetas esfumadas,

luciendo un pasado de futuro incierto se asoman apenas cual negro desierto... lejano ese rio de luminosas pinceladas.

Olas quietas responden al ocaso,

murmuran dolientes ante el triste fracaso sin palabra en nuestros labios callados...

el brindis espera tras los troncos sellados.

Horizonte deslucido permanece indiferente, otras aves peregrinas volarán a su lado;

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ecos en cadena lo rodearán lentamente... nuestro canto es pauta y niebla en el prado.

Mas este amor obliga al bello amanecer,

trasciende este océano con inmenso querer; espera el ruido de las ondas esperanzadas...

intrincada trama de pieles encontradas.

FALSOS HÉROES

Falsos héroes que no saben de martirios, pesan sus incongruencias que destilan ironías desalojando cruelmente las almas incautas,

despojando de bondades a quienes embaucan.

Héroes de papel consiguiendo seguidores, destrozando la verdad limpia y permanente;

simios en extinción con sus bucólicos ademanes... vacíos sus recovecos, sus senderos, sus desvanes.

Maldiciendo la palabra saborean aventuras,

displicentes entes en deslucidas corazas; moran en los senos envolviendo sus intenciones... edifican mentiras creíbles con sus vanas ilusiones.

Trotamundos aburguesados aparentando caridad,

no solicitan permiso para fingir y delinquir; notorios sus ropajes que solo corroen la mirada, inverosímil es el juego que asemeja a la nada.

Tristes humanos emulando a dioses del olimpo, caretas abajo descubren las miradas impúdicas;

aglomeración de falsedades opacarán el universo... nubes siniestras reinarán en todo mundo inverso.

ALGUIEN...

Alguien que imagine un hogar. iluminando los atardeceres largos;

pronunciando a viva voz mi nombre, alguien que llene mis silentes letargos.

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Alguien que suavice mis llantos,

dejando pétalos de rosas en mi frente; enterneciendo mi alma solitaria,

alguien que acapare mi corazón latente.

Alguien que roce mis labios abiertos, extrayendo la savia de mi dorada piel;

cubriéndome con su caricia eterna, alguien que saboree el elixir de mi hiel.

Alguien que descubra mi calmada espera,

retirando el hielo de la escarcha cristalizada; colocando su manto de estrellas fulgurantes, alguien que complique mi trama idealizada.

Alguien que recuerde que existo ahora,

colmándome de susurros en mi reír; amándome al compás de las eternas olas,

alguien... ¡alguien!... alguien con quien morir.

SIN AURORAS...

El llanto gobierna mi sentir, no puedo evitar este sufrimiento mi alma se partió en pedacitos al percibir tu adiós definitivo

y al pensar que jamás volverás.

Quiero decirte mi último te amo agitado corazón tan maltratado, si yo te amo con locura mi vida porqué tu alejamiento paulatino

porqué escoges el abandono cruel.

Realidades gobiernan el espacio, los sueños de amor se esfuman libres la alegría que compartíamos se dilató quimera imposible en este presente ilusiones que se estamparon firmes.

Somos diferentes en nuestro devenir

ambientes delimitan la conducta ideal; difícil es el retorno a la añorada felicidad

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atrás quedaron los silencios hablados... y tantas auroras de cuerpos entrelazados.

SENTIMIENTO EXILIADO

Es el tiempo quien decide la inmensidad de este amor, y sus espacios severos que no tardan en llegar el recorrido es intrincado en su certeza y dolor, la realidad augura que el final no ha de tardar.

En cada estrella que contábamos en los ocasos, resplandecía su brillo, opacando los fracasos;

y en toda inmensa luna que seguía nuestra huella se alojaban las caricias de tu esencia tan bella.

Silencios que agotan la calma y su apariencia, gritos adormecidos se escapan en carrera loca; dejando una línea monótona de no conciencia, y sellando los suspiros que tu ser me provoca.

Huellas intrincadas se bifurcan en el firmamento,

aflojada mi mano que se aferraba al momento; ya no hay encuentros ni risas adoradas

ya no hay llantos compartidos, ni pieles selladas.

La espera es mi esperanza de tu pronto regreso, mi ternura te entrego cual baluarte apreciado: es la vida misma la que nos cede este receso y quizás el espacio del sentimiento exiliado.

¡AHÓGATE EN TU SOLEDAD!

Te arriesgaste a amarme así, con la pasión tan desmedida; pero tu atrevimiento se acabó

me iré lejos de tu maldita vida.

Suelta mi mano ahora mismo te dejo el último beso sellado;

necesito libertad como el viento deshacerme de tu asedio odiado.

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Déjame desatar todas las amarras,

que tus ansias anudaron ciegas; no quiero saberte en mis sueños

ni en mi lecho dispuesto a medias.

Me encerraste en tu gran infierno, creías que era tu amada propiedad; más ya respirar me era imposible, ahógate en wisky y en tu soledad

Me hartaste con tu vil locura,

de aislarme en un paraje agreste; conseguiste morir de tanto amor... ¡Conseguiste adelantar mi muerte!

TU ADIÓS

No se escuchará el trinar en murmullo, ni las campanadas repicando lastimosas;

el latido de mi corazón ya ha cesado, mi llanto silente brota desesperado.

Un adiós sin retorno leo en tus ojos.

implorándome que cierre ya esa puerta; dolor intenso en mi alma desfalleciente.

comienza el drama de sacarte de mi mente.

Deambular sin destino por los espacios, la mirada perdida, no tengo tu abrazo;

desfigurada mi cara por la brisa traidora, espectro en vida y muerte sin demora.

Desgarrada mi piel sin tu caricia, mis besos sellados de por vida;

mi cuerpo lacio y vacío al no amarte, morir!... morir antes que olvidarte.

La soledad es la reina y señora!

me atrapa en la esfera de granito; no suelta mi mano tan temblorosa...

ya me desintegro en tu adiós infinito.

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¡LA SOMBRA MAS HERMOSA!

Meciéndome despacio sin apuro, contemplo tu rostro ya oscuro;

esfumándose tras el velo, rasgando mi cielo entero.

Soledad enemiga de mi sol, encegueces mi loco furor;

me plantaste tu mano pesada, me robaste su sonrisa tan amada.

Prisión eterna enreja mi mente,

no poder amarte, no poder tenerte; encerrarte entre mis tenues latidos, quisiera gritar mis eternos quejidos.

Me dejaste sola en total agonía,

mi corazón no acredita esta porfía; arrancaste la esencia de mi alma,

muero lentamente, con lenta calma.

Adiós amor te extrañaré infinitamente, llévate mis versos sigilosamente;

recuérdame así desnuda y temblorosa seré por siempre y para siempre...

¡Tú sombra más hermosa!

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EL FRUTO DE MI DESTIERRO

Dime si el tiempo nos erosionó si construyó una férrea muralla o nos dividió en sendos clivajes

ahuyentando hasta la pasión defenestrando el romanticismo

dejando cenizas de lo que fuimos borrando recuerdos de lo vivido.

Dime si tratarás de olvidarme si es así seremos maldecidos

ennegrecerán las nubes del cielo morirán los amaneceres eternos

tu nombre se esfumará con el alba la pena será cómplice del silencio

y el fin será el fruto de mi destierro.

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NO TE DEJARÉ CAER

Quisiera darte la esperanza que tanto necesitas rozar dulcemente tus labios humectando tu boca oír juntos el crepitar de la nieve sobre tu ventana desafiar el silencio cautivo observando la aurora.

Trataré de acompañarte aun burlando la muerte

enterrando todos los miedos que nos separan transitando por los ejes cartesianos de tu alma

sin importarme tu imagen, sólo el temor a perderte.

La fe es el dogma sagrado de los desahuciados aférrate a ella, escucha las voces de los ángeles

inmólate ahora en mi espíritu. ¡Respira mi oxigeno! Recuerda nuestro lago y las madreselvas en flor.

Deja que mi calor sea la sublimación de tu cuerpo no te dejaré caer…¡Valora cada segundo de vida! Olvida el frío, te estrecho con fuerza en mi pecho

y escuchemos juntos el sonido del mar a la deriva .

Tus lágrimas cristalizan acariciando mi esencia aun te sigo amando como a nadie amé en la vida

pero no es tu momento mi cielo, déjame partir amor regreso al mundo de los muertos, allí tengo cabida.

SI HE DE MORIR QUE SEA HOY

Si he de morir que sea hoy estoy preparado para el dolor para la pena y el desencanto

nada puede ya desilusionarme ni siquiera un estúpido engaño.

Lo he soportado todo por años me aniquilé en cada primavera

en las noches viscerales del otoño donde los sueños eran destruidos

donde amar era tan solo una quimera.

Si he de morir que sea hoy espero taciturno el último suspiro tal vez un alma venga a buscarme

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o el diablo quiera conquistarme para el caso, todo me da lo mismo.

LA MÚSICA ES LA VOZ DE MI TRISTEZA

La música es la voz de mi tristeza donde la muralla de la pena existe

lágrimas de dolor juegan con mi razón poderosas guerreras horadándome sin misericordia hasta destruirme.

Como existir en la magnitud del no ser perdido en los pentagramas de la vida arrasar con la estéril voluntad interior

zozobrar en un solfeo sufriendo por amor entre utopías de sueños que coexisten.

La música es la voz de mi tristeza

nadie lo sabe tan solo mi alma ella disocia improntas de mi esencia

trata de darme oxígeno para sobrevivir a la mentira premeditada de palabras vanas.

Densos escudos soporta mi corazón

me protegen de la hipocresía para no diluirme llamarme a silencio fue disfrazar mi paz interior

pero mi mente no olvida la voz de la traición y la música está siempre ahí para redimirme.

BUSCA UNA PALABRA DE AMOR

Creo entender el lenguaje de otros mundos alguna vez tuve uno similar e impenetrable

en la trilogía de la felicidad inalterable simbiosis de aura, esencia y plasma

donde se extirpaban las esquirlas del dolor.

He saltado los puntos quánticos de la lógica descifrado los códigos de otras almas

cambiando locos sueños por esperanza

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creyendo que todos poseían el don de poder fluctuar en el más puro amor.

Dime que ves ahora en ese universo

muéstramelo a través de tus ojos porque yo ya no puedo hacerlo

fotones de luz siguieron el camino del canto sepulcral de las tinieblas aliándose con mis versos muertos.

Dime que ves en ese mundo de novas donde reina la paz sagrada del alma

busca allí los archivos de mi existencia rastros e improntas de mi naturaleza debe haber algo que aún me proteja

busca allí tan solo una palabra de amor.

HE DE RENACER EN ESTA PRIMAVERA

He de renacer en esta primavera y dejar atrás la tristeza del otoño

juntar las hojas secas en un rincón enterrar el sinsabor de la nostalgia archivar en el estante del recuerdo las promesas incumplidas de amor

escritas en otros tiempos de esplendor en el calendario de las viejas cartas.

Debo abrir con el alma el corazón

dejar que el sol cauterice mis heridas respirar el aroma de las rosas en flor

oxigenarme con el verdor de los campos aprender del vuelo libre de las aves

iluminar mi ser con sus trinos celestiales en la emoción de generar la sensación

que la oscuridad perece con el día.

CUANDO SE MUERE LA NOCHE

Cuando se muere la noche mi tristeza está en su cúspide

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imposible tratar de vencerla son como retazos de mi vida

que recuerdan tu risa y tu voz.

Mi alma no tiene retorno es un abismo negro de dolor

mi mente se refugia en la locura evadiéndose de mi débil cordura tratando de no sufrir por amor.

Cuando se muere la noche

misteriosas voces me hablan son sueños archivados en la pena o tal vez asignaturas pendientes

que nutren mi devastación.

En vano trato de no pensar siempre estás en mi corazón

de cuerpo magmático presente nada de lo que intente para olvidarte enterrará mi tortuosa desesperación.

PUEDO CANTARLE AL AMOR...

Puedo cantarle al amor con una lanza imaginaria

atravesando el dolor de mi pecho, conjugando desolación y agonía.

¡Pavesas guardianas horadándome!..

No es un dolor inerte o vestigios de batallas perdidas en el fracaso,

es un dolor crónico que arrasa mi razón, destruyendo mi corazón disolviendo hasta la última fibra.

Puedo cantarle al amor

como el ruiseñor en su agonía siempre de pie y jamás vencido buscando la medicina sanadora que alivie esta pena destructiva.

Pena que se nutre de mi tristeza

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parasitando una a una mis heridas llagas expuestas al viento

donde cada caricia de la brisa hunde más profundo mis espinas.

EL INFIERNO DE LA OSCURIDAD

Todos estos años he intentado recordar el crepúsculo que vi a través de tus ojos los ocasos que morían en cada encuentro el amanecer que nacía en nuestro suspirar

y tu gran amor nutriéndome todo este tiempo.

Hoy la vida me pesa en todos los sentidos antaño el horizonte calmaba mis ansiedades

el viento aplacaba todas las tempestades. ¿Cuánta tristeza el corazón puede soportar? ¡El mar ya no es refugio de mis debilidades!

Llevo una carga de dolor anudada en mi pecho siento como si quisiera de raíz el alma arrancar no oraré, ni pediré ayuda por esta pena inmensa y así mi conciencia sea destructiva o soberbia

prefiero morir solo antes que me vean claudicar.

Tú sabes mi amor que a ti te amaré toda la vida aun con esta depresión gobernando mis momentos que nunca me abandona y hasta borró mi sonrisa. No intentes rescatarme del caos que es mi destino deja que me exilie en el infierno de la oscuridad.

ALGÚN DÍA REGRESARÉ...

Algún día regresaré…. Cuando caigan las primeras hojas del otoño sé que es demasiado tiempo para vivir sin ti

pero debo intentarlo, por mí por vos por nosotros.

Mis horas están llenas de lindos recuerdos de vivencias escritas en amaneceres enteros

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me hiciste valorar las cosas simples de la vida me sentí en la cúspide contigo tocando el cielo.

Algún día regresaré……

cuando tú ultima lágrima haya perecido lamento si sembré llanto en tu corazón

no intento justificarme ni pido tu perdón ya tengo mi castigo, tu indiferencia y olvido.

No logré dejar ni por un segundo de amarte aun cuando creí ser dichoso en otros brazos

me mentí yo mismo y sin querer te mentí a vos y mediante estas líneas te escribo mi rotundo fracaso.

HE AMANECIDO...

He amanecido entre los dioses del recuerdo aquellos que alguna vez fueron guerreros cuantas veces he peleado en otras vidas

destilando el sabor salino de la adrenalina hasta ser vencido por la hoz de la mentira.

He padecido la derrota hasta los huesos

sin consuelo, viviendo al ritmo del vértigo arriesgándolo todo hasta autodestruirme

luchando batallas ajenas hasta dejar el alma defendiendo con honor la palabra silente.

Hoy peleo contras mis fantasmas de arena aquellos que alguna vez me han precedido furiosos se masifican e invaden mis sueños

desde el infierno con sorna me maldicen taladran con su resentimiento mi cerebro.

He amanecido eso es lo más importante

en este siglo perduro en el umbral del tiempo no importa en qué dimensión me encuentre

en qué corazón habite mi alma guerrera por doquier mi esencia estará presente.

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NO EXISTE EL AMOR SIN DOLOR

No existe el amor sin dolor ni tempestad, sin sufrimiento.

¡Nos amamos tanto en estos años! hasta perder la noción del tiempo.

No existe el amor sin confianza

se fragmentó toda esperanza la desilusión nos autodestruyó

sin rencor, ni retorno, ni revancha.

No existe el amor sin los sueños sin el deseo ardiente y codiciado

extraño embriagarnos por las noches entre tus dulces besos apasionados.

No existe el amor si tú te fuiste

el corazón sangra en su letal agonía el resultado es nuestra condena la derrota son nuestras heridas.

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