PLATÓN Y EL AMOR

ALGUNAS PREGUNTAS INICIALES…

¿A qué llamamos amor?¿Es lo mismo amar a tus padres,

a nuestr@s amig@s, a nuestr@s compañer@s?

¿Y el amor hacia nosotr@s mism@s, es sólo egoísmo?

¿Es lo mismo el amor hacia una persona que el amor hacia el trabajo, la patria…?

LA HISTORIA.APULEYO “LA METAMORFOSIS”

EROS Y PSIQUE

PLATÓN Y EL AMOR Diálogo el Banquete. Después del discurso de Agatón,

Sócrates replica: "Yo creía tontamente que es menester decir la verdad acerca de lo que se elogia, pero por lo visto no es así, y lo que os ha importado es acumular alabanzas hiperbólicas, atribuyendo al amor lo más grande y bello que se pueda encontrar, sin preocuparse de si es verdad".

DIOTIMA. (ΔΙΟΤΊΜΑ)

"Belleza que existe eternamente, y ni nace ni muere, ni mengua ni crece; belleza que no es bella por un aspecto y fea por otro, ni ahora bella y después no, ni tampoco bella aquí y fea en otro lugar, ni bella para éstos, y fea para aquellos. Ni podrá tampoco representarse esta belleza como se representa, por ejemplo, un rostro o unas manos, u otra cosa alguna perteneciente al cuerpo, ni como un discurso o como una ciencia, sino que existe eternamente por sí misma y consigo misma. Dijo la sacerdotisa, que este es el momento de la vida, que más que otro alguno debe vivir el hombre: la contemplación de la belleza en sí“ Platón.

LA METAFÍSICA DE PLATÓN ES UNA METAFÍSICA DEL EROS.

El camino del filósof@ es el camino de retorno.

El amor a la sabiduría conduce a lo mejor que hay en nosotr@s.

El filósof@ está en estado de perpetuo entusiasmo buscando lo bello, que a su vez es bueno y justo.

El conocimiento no es en Platón un frío juego racionalista de conceptos.

SI EL HOMBRE PUDIERA DECIRLUIS CERNUDA.

Libertad no conozco sino la libertad de estar preso en alguien cuyo nombre no puedo oír sin escalofrío; alguien por quien me olvido de esta existencia mezquina por quien el día y la noche son para mí lo que quiera, y mi cuerpo y espíritu flotan en su cuerpo y espíritu como leños perdidos que el mar anega o levanta libremente, con la libertad del amor, la única libertad que me exalta, la única libertad por que muero.

Tú justificas mi existencia: si no te conozco, no he vivido; si muero sin conocerte, no muero, porque no he vivido.