periÓdico la primicia

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DESPLAZADOS POR LA VIOLENCIA Y AHORA POR LA INDIFERENCIA. MASACRE EL SALADO... La masacre de El Salado es significativa en la historia y dinámica del conflicto armado contemporáneo en Colombia por su magnitud, la crueldad extrema de los victimarios, la escenificación pública del horror, y la duración de los hechos. Pg 3 BOGOTA D.C 14 de Marzo del 2013 UNA VEZ MÁS... MASACRE EN BOJAYÁ PG 4 MASACRES EN COLOMBIA OCULTAS ENTRE “EL PROCESO DE PAZ” PG 5 SINDICALISMO EN COLOMBIA: MUERTE HOMICIDIOS Y AMENAZAS. PG 8 PARO CAFETERO ¿UNA MASACRE? PG 7 LA PRIMICIA CLICK

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Page 1: PERIÓDICO LA PRIMICIA

DESPLAZADOS POR LA VIOLENCIA Y AHORAPOR LA INDIFERENCIA.

MASACREEL SALADO...La masacre de El Salado es significativa en la historia y dinámica del conflicto armado contemporáneo en Colombia por su magnitud, la crueldad extrema de los victimarios, la escenificación pública del horror, y la duración de los hechos. Pg 3

BOGOTA D.C 14 de Marzo del 2013

UNA VEZMÁS...MASACRE EN BOJAYÁ PG 4

MASACRES EN COLOMBIA OCULTAS ENTRE “EL PROCESO DE PAZ” PG 5

SINDICALISMO EN COLOMBIA: MUERTEHOMICIDIOS Y AMENAZAS. PG 8

PARO CAFETERO ¿UNA MASACRE?

PG 7

LA PRIMICIA CLICK

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BOGOTÁ D.C. 14 de Marzo del 2013 BOGOTÁ D.C. 14 de Marzo del 2013

HISTORIA EN OLVIDO MASACREEL SALADO

Colombia es un país que se está desterrando por sí mismo; cuando se habla de Colombia no solo se trata el tema del nombre de un país si no de una sociedad entera que partir de su historia ha marcado diferencia a nivel mundial.LA PRIMICIA va dirigida a aquellos jóvenes que quizás conocen historia de otros países pero aún no conocen lo que ha sucedido alrededor de lo que le pertenece como patrimonio nacional. Este periódico no se limita a brindarle al lector un simple recorrido etnográfico de dolor. Si no dar a comprender dolor como el resultado de procesos sociales y políticos identificables que se han vivido tan solo unos años atrás. Así mismo, no sólo se le da rostro al sufrimiento injusto de muchos, sino que se invita al lector a mirar e registrar estas experiencias individuales en el marco de contextos más complejos en los que se recrea la violencia. El dolor y la memoria individualmente vividos se convierten, a través de la narración, en un dolor y una memoria socialmente compartidos para dejar a un lado la tradición de memorizar hechos.Las masacres en Colombia se habrían vuelto es uno de los actos más violentos y sangrientos de la época;

El tomar conciencia de esto como sociedad no se limita a conocer cada una de las masacres que nos rigió como país, que nos escogió como blanco para que el paramilitarismo cumpliera sus objetivos en medio de una guerra que no nos corresponde batallar, ya que se presume ser un país democrático donde la voz del pueblo es el mando y nos representa ciertas personas en un poder jerárquico. Pero como Colombia llego a ser unos de los países con más conflictos sociales es una guerra que se quiera o no se debe batallar, las estrategias no las escoge quien se encuentra al mando político sino que debería ser escogidas por nosotros y quienes nos representa dar a conocer esa voz de pueblo que por miles de años ha sido maltratada a nivel socio cultural.Así que LA PRIMICIA asume con rol principal pretende llegar poder mostrar más allá de lo que se distorsionado en un medio masivo de comunicación y contra poner versiones no solo por parte de los victimarios

EDITORA GENERAL Ana Maria TorresJEFE REDACCIÓNAna Maria TorresCOORDIANDORA EDITORIALAna Maria TorresDISEÑOAna María TorresCORRECCIÓNAna María TorresFOTOGRAFIASImagenes Google

La masacre EL SALADO sucedió entre el 16 y 22 de febrero del año 2000, cometido por el bloque Norte de las Autodefensas Unidas de Colombia (Frente 37 de las Farc). La masacre de El Salado es significativa en la historia y dinámica del conflicto armado contemporáneo en Colombia por su magnitud, la crueldad extrema de los victimarios, la escenificación pública del horror, y la duración de los hechos.El salado está ubicado al Sur de la ciudad de Cartagena, en el Monte de María. Esta masacre fue advertida 2 meses antes de llevarse a cabo por una avioneta “fantasma” que sobrevoló el territorio, arrojando panfletos donde comentaban que disfrutaran el tiempo que tenían ya que se les iba a terminar. La matanza consistió en degollamientos, desmembramientos, torturas, jugaban fútbol con las cabezas de los decapitados; empalaban a mujeres y ancianos pero al mismo tiempo destrozaron las casas y el comercio de la población. Obligaron a los habitantes a concentrarse

alrededor de la cancha de baloncesto frente a la iglesia separando hombre mujeres y niño que dejó

Cientos de campesinos

masacrados y en la cual

muchos habían sido forzosos espectadores.

Los paramilitares discutían entre ellos para ser quien matara a una persona; hacían sonar los tambores y durante esto otro integrante de estas fuerzas leía la biblia, es decir que no solo acabaron con vidas si no que acabaron con su lo que formaba parte de su riqueza cultural e histórica de este pueblo, las cuales quedaron marcadas por el terror. La cifra de los muertos no es exacta de hecho después de la masacre se seguían encontrando cuerpos en fosas comunes dentro y a las afueras del pueblo. Los habitantes no tenían explicación alguna del porqué de esta masacre sin embargo fueron asesinados y torturados de una manera inexplicable e inhumana. Esta masacre fue dada por estrategias territoriales, exactamente nacional, regional y local del grupo paramilitar, donde el blanco de oportunidad fue este pueblo; para llevar a cabo

su expansión. En estos tiempos se llevaba a cabo el proceso de paz entre el gobierno de Pastrana y la guerrilla. Los medios presentaron las versiones del grupo paramilitar, la versión preponderante difundida y recreada que según ella, en El Salado habrían muerto habitantes en medio de combates entre las Farc y los grupos paramilitares; pero no desplegaron a quienes verdaderamente afecto y vivieron este terror. Sin embargo después de la masacre siguieron ocurriendo asesinatos que aún no tienen razón alguna; no solo las muertes son las que siguen sin explicación si no que hay sucesos que mientras las fuerzas públicas o militares estaban presentes la masacre continuaba. Incluso el gobierno no da argumentos válidos y lógicos dentro del contexto que revelen sucesos dentro de esta masacre de terror que se dio durante seis días en El Salado.Muchos Colombianos se han fijado y se han perturbado por otras historias del mundo, pensando que este tipo de matanzas quizás solo se da en países de guerra como Irak y se sorprende en ver al diario las noticias que cubren los medios en aspectos de hambrunas, torturas humanas entre otros. Pero incluso no han notado la historia de su propio país. No es necesario servir de apoyo a otros países cuando en Colombia, que es

un país lleno de recursos por explotar hay gente que muere de hambre a diario y otra que muere en guerras que no le corresponde batallar. La reconstrucción de los hechos es además pertinente porque hoy en día el Estado ni la sociedad tienen certeza sobre lo que pasó ni sobre su magnitud.El salado es una masacre que nos corresponde como País, muchos de ellos aun después de trece largos años siguen recordando la masacre como parte de su historia, otros no han sido restituidos en sus tierras pero todo el pueblo solo pide la ayuda del gobierno y un futuro mejor.Algunas víctimas y sobrevivientes de El Salado ya rompieron el silencio frente a la sociedad y el Estado; ostentando lo que represento ser un blanco del paramilitarismo, que significa que se llegue a imponer acontecimientos para hacerlos parte de la historia que partió una historia y una cultura llena de vida y costumbres; como lo fue hacer parte de su memoria (La memoria se construye desde escenarios, experiencias sociales y políticas). Pero la sociedad y el Estado no lo han respondido completamente frente a ellos cuando

si no de las víctimas; intentar de crear una conciencia como ya dicho antes no por mostrar las masacres y el dolor si no por comprender aquello que un Colombiano siente convertirse en un objeto o en un medio martirizado sin culpa alguna.Espero que como lector se vaya más allá de unas letras y quizás si se conoce pasemos al entender que la guerra es de todos y que como ocurrió en una de las masacres “LA INDIFERENCIA” no sea la que nos esté desplazando realmente.

LA PRIMICIA escribe para que se deje de enterra y callar las masacres que en y por años ha vivdo nuestro país; y no se ha podido liberal.

ANA MARIA TORRES FUQUEN

FUENTES* h t t p : / / w w w . y o u t u b e . c o m /w a t c h ? v = p R y t l G i f U N A (CONTRAVÍA - El Salado: 11 años de indiferencia)* h t t p : / / w w w .ntrodememoriahistorica.gov.co/descargas/informes2009/informe_la_masacre_de_el_salado.pdf*http://www.colombiaenaccion.gov.co/2012/05/02/conoce-la-historia-de-la-masacre-de-bojaya-hace-10-anos/info_bojaya_parte1/* h t t p : / / w w w . f e s c o l . o r g / i n d e x .php?option=com_content&view=article&id=226:panorama-del-sindicalismo-en-colombia&catid=13:analisis&Itemid=10

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BOGOTÁ D.C. 14 de Marzo del 2013 BOGOTÁ D.C. 14 de Marzo del 2013

l conflicto armado en Colombia se plantea como una necesidad y obligación social con las víctimas, con la reconstrucción de la comunidad política y con la reconfiguración del sistema democrático. Lo que realmente después de 13 años sigue en juego no es sólo la dificultad de expresar lo vivido y lo sentido, sino el miedo a que se repita. La masacre de El Salado ilustra las estrategias de exhibición de la violencia, pues no sólo se trató de exhibir los cuerpos en los espacios públicos sino que los convierte en rutas de terror, huellas emocionales en las víctimas sobrevivientes, que experimentan sentimientos de miedo, tristeza, impotencia, humillación, rabia y quizás desesperanza. La acumulación de tensiones y la no asimilación de tales hechos hacen más complejos los problemas de salud mental existentes en la población de El Salado.La pérdida del liderazgo comunitario a causa de la violencia inhibe la participación comunitaria, bloquea la reconstrucción de la vida pública y niega la autonomía comunitaria, impidiéndoles la libertad de acción necesaria para decidir su destino y volver a reconstruir su pueblo. Un mártir se convierte en un emblema del “valor” de las víctimas, aún en las condiciones más crueles y humillantes, y esto fue lo que sucedió en el Salado. Como país es poder llegar a comprender la impotencia que este pueblo tuvo frente a la posesión de territorio local que obtuvo los grupos paramilitares violenta, sangrienta y

forzadamente.La iniciativa de recordar el acontecimiento de la masacre del 2000 se ha extendido hasta la violencia como proceso y se ha concretado en la construcción de un Monumento a las Víctimas. Uno de los testigos declaró:

“SI ALGUN DIA FUIMOS

DESPLAZADOS POR LA VIOLENCIA

QUE AHORA NO NOS DESPLACE LA INDIFERENCIA”…

Es decir que como Colombianos esta guerra también es nuestra, que es hora de tomar conciencia social y mirar que la realidad de violencia se encuentra en nuestro país; que es de gran memoria histórica y cultural conocer lo que ha sucedido y ha marcado territorio nacional,

regional y local. Que este pueblo por haber sido prácticamente destituido de su territorio, despojados de sus pertenencias y hasta de sus vidas; como sociedad colombiana no se llegue a desterrar u olvidar por completo por lograr ser indiferentes ante tal masacre que aun muchos de los colombianos no conocen.En conclusión la MASACRE EL SALADO no se puede quedar impune tan solo por el pasar de los años; no solo debe ser tema de interés para aquellos campesinos que aun guardan la esperanza de ser restituidos en sus tierras o quienes aún siguen intentando reconstruir parte de sus vidas y su pueblo, sino que debe ser tema de un país donde el progreso y el interés colectivo se vuelva parte de su propia historia. El Salado fue, es y será siendo territorio Colombiano.

MASACRE DE BOJAYA.SOMETIDA A UN OLVIDO...

la llamada masacre de Bojayá, que ocurrió en un caserío llamado Bellavista a orillas del Atrato chocoano, cuando un cilindro bomba cayó en la iglesia en donde los habitantes de esa cabecera municipal se refugiaban de los cruentos combates que en ese momento libraban guerrilleros de las Farc y paramilitares.La noticia que originó esta conmemoración en todos

los medios de comunicación del país es que...

Bojayá sigue sumido en la pobreza y el

olvido. ¿Es esa realmente la

verdad?un día’ (es un milagro que no le hayan cambiado el nombre a la figura) bien lejos de Bojayá. Y por eso había que ignorar por primera vez esa conmemoración hasta en la página web de la institución que se encargó de la construcción del nuevo Bojayá en la última década. El más indolente. Nada de eso importa al Gobierno Santos. Todo lo que tenga que ver con Acción Social y sus buenas gestas por todo el país mientras existió, hay que

desaparecerlo de la memoria colectiva, así el Estado aparezca como el más indolente. Lo que importa es el show mediático, por eso había que hacer un ‘Cogestor por un día’ (es un milagro

que no le hayan cambiado el nombre a la figura) bien lejos de Bojayá. Y por eso había que ignorar por primera vez esa conmemoración hasta en la página web de la institución que se encargó de la construcción del nuevo Bojayá en la última década. La tierra del olvido.La realidad hoy de Bellavista, o Bojayá, es la misma de siempre en todos los pueblos del Chocó. Que sea noticia por los diez años de la tragedia no quiere decir que son los únicos que no tienen energía porque la alcaldía no tiene plata para el combustible de la planta; o los únicos que no tienen problemas de atención en salud y educación porque la administración municipal o el departamento no tienen recursos para contratar personal capacitado y profesores para suplir esas necesidades.

En Colombia el 50 por ciento de los sindicatos se agrupan en tres centrales sindicales: la Central Unitaria de Trabajadores CUT, la Confederación General de Trabajadores CGT, y la Confederación de Trabajadores de Colombia, CTC. La CUT es la central más grande, al concentrar el 65 por ciento de todos los trabajadores sindicalizados y en ella están confederados: la Federación Colombiana de Educadores FECODE, el Sindicato Nacional deTrabajadores de la Industria Agropecuaria SINTRAINAGRO, y la Unión Sindical Obrera de la Industria del Petróleo USO.

•En Colombia el acto administrativo de registro de un sindicato se ha convertido en una barrera muy importante para el ejercicio del derecho de asociación sindical. Así entre 2002 y 2007 se rechazaron 491 iniciativas de trabajadores tendientes a la creación de un sindicato. De igual forma, es el único país en América Latina en el que el gobierno tiene la facultad de disolver un sindicato por vía judicial.•Las convenciones colectivas en Colombia van en retroceso en relación con otros tipos de acuerdo entre trabajadores y empleadores como el pacto colectivo y el contrato colectivo,

PANORAMA SOBRE SINDICALISMO EN

COLOMBIA....

siendo este último muy cuestionado por cuando se considera como impulsor de la tercerización laboral.

•Si bien Colombia a finales de los años noventas ratificó los Convenios 151 y 154, referentes a la negociación laboral en el sector público, aun está pendiente la promulgación de la ley que implemente su aplicación. Y es que en el país la mayoría de los trabajadores sindicalizados están afiliados a sindicatos Estatales.

Colombia es el país del mundo con el

mayor número de asesinatos de

sindicalistas, concentrando el 63 por ciento de los casos durante la última década.

FECODE, SINTRAINAGRO y la USO, son los sindicatos que han sido más afectados por la violencia en contra de sindicalistas. Sólo estas tres organizaciones concentran el 64,6 por ciento de los casos de asesinato de sindicalistas en todo el país entre 1984 y 2010. Por su parte, Antioquia es de lejos el departamento más afectado por la violencia antisindical, concentrando cerca del 47 por ciento del total de casos de asesinato de sindicalistas entre 1984 y 2010.Pese a los esfuerzos

hechos en los últimos años, la impunidad sigue

siendo muy alta y supera el 96 por

ciento. A partir del 2003, se ha presentado una disminución importante un el número de asesinatos de sindicalistas; sin embargo, otros tipos de violación a los derechos humanos de los sindicalistas, como amenazas, y desplazamiento se mantienen en los mismos niveles.

FRAGMENTO José Vidal Castaño - Friedrich-Ebert-Stiftung en Colombia (FESCOL)

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BOGOTÁ D.C. 14 de Marzo del 2013 BOGOTÁ D.C. 14 de Marzo del 2013

LAS VOCES DEL PARO CAFETERO

Varios medios departamentales y nacionales como El Salmón Urbano, El Nuevo Día, Pacocol y Ecos del Combeima, han registrado y comunicado los abusos y la brutalidad de los miembros de la fuerza pública a manos del Esmad, sobre la comunidad campesina que acude al paro cafetero.En los hechos registrados desde hace dos días, los miembros de la marcha han sido graves víctimas de la violencia que usa el Gobierno Nacional, para evitar que el campesinado exija los derechos que el Estado debería garantizar.

Ante esta grave crisis humana,

periodistas tolimenses dan a conocer fuertes

relatos de la brutalidad del

Gobierno Nacional en la marcha

cafetera:

Con extrema brutalidad la fuerza pública y el Esmad agredieron la multitudinaria y pacífica manifestación de protesta que viene desarrollando el campesino cafetero en trece departamentos de Colombia. La brutalidad por parte de los esbirros del régimen, demuestra una vez más que éstos están exclusivamente para defender los intereses de clase de la burguesía altamente transnacionalizada y para reprimir cobardemente al pueblo humilde e indefenso.

En el Tolima, fueron agredidas las protestas ubicadas en Boquerón, Ibagué y Armero – Guayabal, al norte del departamento. En el caso de Ibagué, fue infame, cobarde, artera y criminal. Se encuentran allí, cerca de cinco mil labriegos pacíficamente esperando del gobierno nacional una solución justa a sus nobles solicitudes y la respuesta desalmada del gobierno es enviar una multitud de robot humanos a agredir tal como lo hicieron.

Mientras una inmensa mayoría almorzaba en los restaurantes aledaños, otros reposaban

apaciblemente, medio adormilados incluso, algunos jugaban una partida de ajedrez y otros caminaban por la vera de la avenida sin obstaculizar para nada la vía panamericana, de un momento a otro comenzaron a disparar bombas de aturdimiento y lacrimógenas a diestra y siniestra.

LA VOZ DELCAFETEROUn funcionario de la Defensoría del Pueblo, dijo: “Nosotros estábamos cerca al Esmad y justamente el defensor regional del pueblo, doctor Miguel Ángel Aguiar Delgadillo, intentaba convencer al comandante para que no actuara por cuanto todo estaba en paz, tranquilidad y armonía, pero no fue escuchado, inmediatamente da la orden y nos agreden a nosotros también”.

Luis Eduardo Bonilla, campesino del municipio de Rovira, indicó: “Vinimos desde por la mañana al paro y la policía nos recibió con gases y todo. A mí me dispararon con esa vaina de disparar y me pegaron en un brazo.

La disculpa que ellos dicen es que notros les estábamos tirando piedra, pero eso es totalmente falso. Solamente íbamos caminando y comenzaron a disparar esos gases.

Quiero pedirle al gobierno

nacional que nos apoye en vez de

estar tirándonos bombas,

queremos que nos mejore el precio de la carga de café, porque está muy malo. En eso es que estamos. Ahora me voy para el hospital porque estoy herido, pero la idea es seguir en la lucha. Estoy esperando una ambulancia, no llega, tengo que buscar otros medios para ir al hospital.

FRAGMENTODANIELA PEDREROS SOLER

PROYECTOS Y COMUNICACIONES

TELEVISIÓN

AUNQUE ESTOS ACONTECIMIENTOS NO SEAN TITULADAS COMO MASACRES NO SIGNIFICA QUE NO SEAN

UN ACTO DE VIOLENCIA, Y SE PUEDE PRECISASR QUE NO ES

POR PARTE DE LOS GRUPOS PARAMILITARES DE COLOMBIA

SI NO SE LAS MISMAS AUTODEFENSAS QUE SE

SUPONE QUE POR SEGURIDAD DE LA SOCIEDAD EL GOBIERNO

HA IMPUESTO. ANA MARIA TORRES

Humanos, Todd Howland, advirtió que la masacre es "un grave peligro" para el futuro del país, y pidió la procuración de justicia del gobierno para que masacres como la de Santa Rosa de Osos no se repitan.

"Asesinar campesinos para

enviar un mensaje a otras personas reviste un grave peligro para los

derechos humanos y para el futuro

del país", dijo Howland en un comunicado de prensa.

A su vez, El defensor del pueblo de Colombia, Jorge Armando Otálora, advirtió de un posible desplazamiento de campesinos en la región de Antioquia, y pidió al Gobierno medidas "para proteger la vida" de los habitantes ante la presencia de grupos neoparamilitares.Mientras los familiares entierran a los campesinos asesinados en “la masacre de la tomatera", por haberse producido en una finca dedicada al cultivo de tomates de árbol, el país espera los resultados de las autoridades para hacer justicia en la matanza más grave ocurrida en Colombia en los últimos años.

Lo más importante

*La masacre de 10 campesinos en Antioquia ha puesto en alerta al gobierno colombiano frente al temor de un rebrote de este tipo de crímenes de grupos paramilitares

*Hombres armados asesinaron a los campesinos en una finca donde trabajaban del municipio Santa Rosa de Osos

*Las autoridades apuntan a que se trata de un crimen perpetrado por la banda criminal 'Los Rastrojos'Otra versión indica que el asesinato fue en venganza por una extorsión que no fue pagada

Una masacre en Colombia revive el temor de laviolencia paramilitar

El gobierno colombiano se encuentra frente al desafío de resolver el caso de una masacre ocurrida este miércoles por la noche cuando hombres armados asesinaron a 10 campesinos en Antioquia, situación que pone en alerta a las autoridades ante una escalada de violencia similar al terrorismo paramilitar que vivió el país en la década pasada.El ministro de Defensa, Juan Carlos Pinzón, convocó este viernes a un consejo extraordinario de seguridad para analizar el caso, y en previsión a que vuelvan a brotar las matanzas que fueron el modus operandi de las Autodefensas Unidas de Colombia (AUC), los grupos paramilitares desmovilizados en el gobierno de Álvaro Uribe.

"Esto es el infierno",

fueron las palabras que le dirigió el secretario de Gobierno de Antioquia, Santiago Londoño, al gobernador del departamento, Sergio Fajardo, cuando llegó al lugar en la mañana del jueves y se encontró con la entrada de una casa ensangrentada."Se sabe que anoche asesinaron a diez personas con la lógica de la masacre", declaró el ministro Pinzón el jueves. "Precisamente este año tenemos el número más bajo de masacres de toda la década, pero el hecho de que se presente ésta nos parece de la mayor gravedad".Tras difundirse la noticia por el país, el ministro Pinzón confirmó que en esa región fue capturado en los días anteriores un hombre

conocido como alias 18, el presunto jefe de Los Rastrojos, por lo que dijo que no descartaba que la captura estuviera relacionada con el crimen de los campesinos.El gobierno también hizo pública una recompensa de 50 millones de pesos (unos 27,500 dólares) por información que lleve a la captura de los responsables.Sin embargo, en Santa Rosa de Osos circula una versión diferente a la de las autoridades, pues se afirma que Los Ratrojos habrían cometido los homicidios en venganza por una extorsión que no fue cumplida por el propietario de la finca, según testimonios de los aterrorizados campesinos.Al parecer, el propietario de La España es dueño de otras fincas donde trabajan muchos campesinos, lo que corresponde con una declaración del gobernador de Antioquia, Sergio Fajardo, quien afirmó a la prensa local que Los Rastrojos y Los Urabeños, la otra banda con presencia en la región, mantienen enfrentamientos por el control de ese territorio para sus actividades del tráfico de drogas y la extorsión.El municipio donde ocurrió la matanza se encuentra en una región en la que históricamente han tenido gran presencia los paramilitares y donde, tras la desmovilización de las AUC, tomaron mucha fuerza las bacrim, o bandas del crimen organizado, uno de los principales problemas de seguridad que enfrenta el presidente Juan Manuel Santos.Ante la situación, el representante en Colombia del Alto Comisionado de las Naciones Unidas para los Derechos

mexico.cnn.com/mundo/2012/11/09/una-masacre-en-colombia-revive-el-temor-de-la-violencia-paramilitar

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LAS MASACRES EN COLOMBIA

Las diferentes épocas de violencia en Colombia se han caracterizado por tener un mecanismo atroz: las masacres.Algunas de las más populares, por su repercusión mediática y los fallos judiciales en torno a ellas, han sido las de Mapiripán, Trujillo, El Salado y Bojayá; y algunos califican lo sucedido en la toma y retoma del Palacio de Justicia como una masacre u holocausto.Las masacres aparecieron a mediados de los ochenta como una forma de intimidación de los paramilitares en poblaciones bajo el control territorial de la guerrilla en zonas como Urabá, el Magdalena Medio y el Meta. A mediados de los noventa reaparecieron por todo el país como un sello de la presencia y barbarie de los paramilitares Las clases dominantes en Colombia han asesinado siempre para mantenerse en el poder y para ello utilizan a sus esbirros tipo Mancuso y Castaño. La oligarquía colombiana ha hecho de los llamados “paramilitares” para violentar su propio ordenamiento jurídico y las consecuencias de ello en lo relativo a uno de sus aspectos más sangrientos y aterradores: Las Masacres, escribe el analista Allende La Paz desde Colombia.

La pomposa iniciación del Show

de AUV con las AUC, perdón, quise decir, “el proceso

de paz con los paramilitares”,

tan promocionado y sublimado por los medios de comunicación burgueses colombianos e internacionales, nos lleva a la necesidad de mostrar, así sea lo más sucintamente posible, el origen y la utilización que la oligarquía colombiana ha hecho de los llamados “paramilitares” para violentar su propio ordenamiento jurídico y las consecuencias de ello en lo relativo a uno de sus aspectos más sangrientos y aterradores: Las Masacres.

En el informe presentado sobre Colombia por la Alta Comisionada de la ONU para los Derechos Humanos, Mary Robinson, ante la Comisión de Derechos Humanos, cuyas sesiones terminaron el 26 de abril del 2.002, por primera vez en la historia un funcionario de dicho organismo llama la atención de una persona por lo que piensa hacer.

El llamado fue para Álvaro Uribe Vélez quien ha manifestado estar dispuesto a armar un millón de civiles para enfrentarlos a la insurgencia. Ello no es de extrañar ya que ha sido una práctica común de diferentes gobiernos la utilización de “civiles” para desarrollar tareas de contrainsurgencia. Las masacres antes y durante la 1ª Fase del Plan Colombia.

Cuanto cinismo, en un comunicado del 04 diciembre de 2001, reproducido por los medios de comunicación con gran resonancia,

los grupos paramilitares

anunciaron que “no realizarán

más masacres y que ahora

sólo realizarán asesinatos

selectivos de no más de 3 personas”

Y continúan los asesinatos selectivos, las desapariciones, las ejecuciones extrajudiciales y todas las demás violaciones que cometen los grupos paramilitares, a pesar de encontrarse en un mal llamado “proceso de paz” entre compadres y colegas. Con este panorama, la población colombiana espera que continúe el debilitamiento de la violencia rural y que surja una estrategia exitosa contra la violencia urbana, para que en las próximas décadas no se cuenten más masacres.

Sin embargo, la orgía de

sangre continuó contra el pueblo

colombiano.

www.rebelion.org/noticia. LA REBELIÓN