partir es morir

8/16/2019 Partir Es Morir

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14 de marzo

No me he movido desde hace un cuarto de hora.

Podría creer que mi carne se ha convertido en una nueva materia y que mi cuerpo se ha soldado al muro que

parece chuparme con su mugre y todas sus cicatrices gangrenadas.

Mis ojos no se han movido desde hace un cuarto de hora. Petrificado en una única visión, como fascinado por su

absoluta falta de inters, miro la gran mancha de humedad que devora uno de los !ngulos de mi celda. "n tres

semanas de encierro he visto a esta mancha cambiar de forma todos los días. Pero esta ma#ana no he tratado ni

siquiera de saber el fantasma de qu objeto me sugerían sus contornos. $a miro simplemente. %intiendo qui&!s

en forma vaga la armonía secreta que liga mis pensamientos al color turbio de la mancha. '(u decir) '(u

pensar) '"stoy pensando en realidad) '"ntonces lo que acabo de saber autori&a a un pensamiento lógico, a una

red de pensamientos) '"s posible traducir en deducciones lo que a pesar de todo se han negado a traducir en

palabras, por otra parte muy simple) '%e puede hacer entrar una botella de un litro en un litro de agua)

*ace tres semanas que espero al hombre que entró esta ma#ana en mi celda.

Pues, desde el momento en que fui condenado a muerte, espero con cierto disgusto al hombre que debe

ubik

“Partir es morir un poco

JacquesSternberg.


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anunciarme que me han acordado el derecho de vivir. +ino esta ma#ana. Pronunció las palabras que yo preveía.

*a sido usted indultado.

%abe usted bien que no tengo ganas de vivir le respondí

No vivir! me dijo.

+aciló un instante antes de e-plicarme por qu. Parecía un poco ebrio, como sobrepasado por la situación. enía

por qu, en verdad.

/sted no ser! ejecutado, pero no vivir!. $a ejecución debía tener lugar el 01 de abril, al alba. Pero en esa fecha

no habr! nadie para proceder a una ejecución.

'Nadie)

2sí es.

"n ese momento, l me reveló los hechos. 3a no m!s gente, ya no m!s mundo, adem!s. $a tierra est!, en efecto,

condenada a muerte. 4omo yo. M!s que yo. "l 5 de abril a las die& de la ma#ana, en el lugar del mundo no habr!

m!s nada. Nada m!s que un vacío como cualquier otro. '"l infinito puede pas!rsela sin la tierra) 2sí parece. %in

duda ni siquiera notar! este incidente privado de consecuencias en el absoluto. /n mundo de m!s o de menos,

'qu importancia tiene)

"-tra#o agregó el hombre, usted ha recibido su indulto, pero de cualquier manera morir!. 3 quince días antes

de la fecha normal de ejecución.

%alió enseguida, ligeramente agobiado, no mucho. %e podría jurar que había visto otros como yo. (ue habíatenido una jornada agotadora, que se resentía por ello y enfrentaba sin placer el día de ma#ana. 4asi el último.

Para l, para mí, para todo el mundo.

2sí es dijo antes de volver a cerrar la puerta. /sted morir! de cualquier modo. Pero si eso puede consolarlo,

no estar! solo. odos estamos condenados a muerte. odos, porque hemos cometido el único delito de nacer.

6esde ahora, somos miles los que esperamos, encerrados en nuestro cuerpo, como en una celda sin salida, una

ejecución capital que debe tener lugar en una fecha e-acta, irrevocablemente. 3 esta ve& la ejecución no sólo es

general sino que no contiene ningún elemento de esperan&a7 nadie ser! indultado a último momento. $as paredes

tienen oídos para escuchar nuestras quejas, el acontecimiento no.

"l fin de este mundo que armó tanto esc!ndalo en el universo, 'ser! ruidoso)

Morir de cualquier modo...

'4ómo creerlo) '4ómo creer en la muerte un segundo despus de haber escapado de la muerte por milagro)

'"ntonces e-istía otra muerte m!s all! de la que los hombres me habían reservado) /n cambio, eso era lo que

venían a proponerme, un simple cambio.

'Pero cómo admitir que en este mundo donde el malestar de unos había constituido siempre el bienestar de otros,

vayamos a tener todos la misma suerte en el mismo segundo) No es posible. $os hombres fueron concebidos

para interpretar papeles de verdugos y víctimas, no para ser todos víctimas de una deflagración abstracta. %ólo

los hombres son peligrosos, sólo ellos acostumbran atar a sus víctimas para entregarlas a la muerte con los pies y

los pu#os ligados. $a naturale&a tiene que ser menos cruel. %iempre deja una posibilidad. $a ierra es vasta, unosiempre puede huir, ocultarse en alguna parte, salvar el pellejo. $os peores cataclismos nunca dieron cuenta de

todos los seres vivientes. %ólo el hombre tiene ese poder. Porque l piensa, porque sabe apuntar y masacrar con

la única intención de matar sobre seguro.


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"scap de los hombres. "so es lo esencial. *an renunciado a darme muerte cuando mi fosa ya estaba abierta.

%oy un superviviente. "scapar a la naturale&a, no puede ser de otro modo. 2ún si no hubiera m!s que un

superviviente, yo ser ese superviviente.

3 cuando la ierra sea sólo ceni&as, cuando los hombres sean sólo polvo, cuando la nada haya encontrado al fin

su definición pr!ctica y sólo yo vea ese espect!culo, entonces podr sonreír y darme el lujo de morir de un mal

resfrío. Pero m!s tarde, un poco despus.

Morir de cualquier manera... "ntonces es cierto que, aun despus de haber escapado a mi ejecución, aun si

escapo a la muerte que nos ha dado cita para el 5 de abril, morir de cualquier modo.

6e uno u otro modo... "n ese caso, 'para qu)

17 de marzo

Morir como los dem!s. "l 5 de abril. odo el mundo pasar! por ese día, ahora lo s.

Me han e-plicado que el acontecimiento del 5 de abril tendr! la fuer&a suficiente para aniquilar a un planeta que,

sin embargo, dio en el pasado buenas pruebas de su vitalidad. Pero el espacio tiende una emboscada a la ierra y

todas las bombas no bastarían para detener lo que se viene.

'4ómo, m!s all! de esos muros que son desde siempre los de alguna antec!mara de la muerte, aceptan los

hombres su suerte) '(ui&! se los acusa, uno tras otro, de algún delito ficticio y se los condena de prisa, pero

oficialmente, a muerte, con el fin de hacerles creer en una lógica de su destino) '4ómo admitir!n las estrellas de

la pantalla que los fuegos de su gloria van a e-tinguirse junto con sus agentes de publicidad8 los hombres de

negocios, que ya no habr! mundo que sostenga sus cheques y sus empresas8 los propietarios que el infinito abre

ya sus fauces para tragar en un segundo todas las propiedades de este mundo al mismo tiempo que algunos siglosde *istoria, una tonelada de gram!tica, montones de geografía, y otras diversas instituciones) "l *ombre que se

sentía otro tras el volante de un automóvil o ante una cuenta bancaria 'va a comprender al fin que no es si

siquiera el hijo del polvo y que sólo la muerte es el centro de su verdad)

6urante algunos instantes, el acontecimiento me desvela, no tanto por su horror, bastante evidente, sino por su

deslumbrante potencial humorístico. 'Por qu no imaginar que se trata simplemente de una farsa gal!ctica) %e

permitió que el hombre se divirtiera con sus juguetes durante algunos siglos, se le dio la oportunidad de

asombrarse a sí mismo creando sin cesar nuevos juguetes antes de concederse el título de rey del universo8 luego,

de repente, decidieron quitarle todo, su vida, su decorado y sus juguetes. 9:roma genial; No podían reservar una

jugada m!s divertida al hombre, que vacilaba a veces de generación en generación antes de desembara&arse de

los múltiples horrores adquiridos7 y ahora le tiran todo su mundo al cesto de basura sin siquiera pedirle opinión.

"l hombre, ese propietario de tan blanda sonrisa, iba a comprender al fin que no era m!s que un inquilino de sumundo. 3 que no tenía arriendo ni defensa. Nada. Ni siquiera su vida.

19 de marzo


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comit de severos ancianos, que ha sido ratificada por decreto despus de algunos días y que acaba de aparecer

en el Diario Oficial . 3a, era ridículo imaginar al hombre devorado por sus tareas burlescas cuando se mantenía

en equilibrio sobre una bola de fuego, 'pero cómo llegar a imaginar siempre devorado por las mismas tareas

cuando esa bola est! a punto de desintegrarse) 6ecididamente el hombre siempre sobrepasar! sus propios

límites. %e habr! hecho digno de sí mismo, y sobre la tumba del *ombre 6esconocido podr!n inscribir como

epitafio que cumplió con su 6eber hasta el fin. 3 con qu respeto por sí mismo.

6icho esto, dado que me condenan a quedar encerrado, me mantienen siempre con la misma puntualidad. odo

el mundo a su trabajo, las jornadas comien&an siempre a las > en punto, sas deben ser las consignas. $os menús,

no obstante, son un poco menos copiosos desde que me indultaron. %in duda, tengo derecho a menos

consideraciones, ya que no ser una e-cepción, sino un cad!ver como todos los dem!s.

ambin compruebo asombrado que me suprimieron el vino. '(u pensar) '(u hacen economías cuando a

pesar de todo van a morir dejando tras ellos un mundo enteramente amueblado y sobrecargado de los m!s

diversos productos) odo esto es muy desconcertante. %in embargo, es muy tarde para dejarse desconcertar.

20 de marzo

/n acontecimiento se encadena a otro.

6icen que el mundo entero espera una comunicación de la m!s alta importancia. "n efecto, los sabios del mundo

entero est!n conferenciando desde hace una semana y habrían tomado una decisión que amena&a con trastornar

la historia del mundo.

$a humanidad espera. 3o tambin. Pero no tengo suerte7 una ve& que realmente pasa algo, y no estoy en la onda.

"s injusto. %in embargo, deberían darse cuenta de que a partir de mi nacimiento aún no ha pasado nada en mi

vida.

"videntemente, el hecho de estar e-cluido me da cierta distancia. Por un único instante, no me siento capa& de

participar de la nerviosidad general que debe enfebrecer al mundo, ya sea la nerviosidad del p!nico o de la

esperan&a. %in embargo es una pena que no me hayan concedido la autori&ación de vivir de cerca esta notable

epopeya, y de participar como ser humano en este drama humano. Me gustaría tanto ver cómo dan vuelta una

p!gina de la historia. %obre todo cuando se trata de una p!gina que amena&a con quedar virgen. =nfinitamente

virgen. 4omo el vacío. 4omo el siempre de lo sin límites y sin fronteras que encierra el vacío.

6uermo mucho actualmente. Me entreno en ser muerto. "s muy f!cil. "s lo que la muerte tiene de inquietante7

su simplicidad8 y hemos pasado tantos a#os inútiles aprendiendo truquitos sabios, tan tontos, tan tontos.

*e pensado tambin que tengo buena suerte. Millones de personas podrían envidiarme actualmente7 sin pena ysin ningún deseo de vivir. 2dem!s, hace mucho tiempo que estoy preparado para morir este a#o. 6e la misma

manera hace mucho que liquid todo lo que constituyó el decorado y el centro de inters de mi vida. =ncluso

mat con mis propias manos al único ser al que me sentía unido. Mi suerte es verdaderamente envidiable.

'(u pasar!) '*abr!n hallado por casualidad el medio de desbaratar las intenciones del acontecimiento previsto

en el programa) '(u piensan hacer) '2traparlo al vuelo, con red, con un cometa) '3 ocultarlo) 'Pero dónde)

'2 menos que supongamos que por el contrario van a lan&ar la ierra a lo largo del espacio, lejos de los

remolinos del acontecimiento) '? qui&! las autoridades científicas van a anunciar, m!s sencillamente, que hubo

un error y que no pasar! absolutamente nada)

Preguntas que ya no me conciernen. %i el acontecimiento, por una u otra ra&ón, no llega a estallar nunca, sinduda me har!n comprender que mi ejecución capital est! siempre a mi entera disposición. %i el se#or tiene a bien

tomarse la molestia de ponerse de pie y vivir su muerte...


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21 de marzo

*acía mucho que la historia no se veía recompensada con una sorpresa tan sensacional. "l hombre es un

verdadero apasionado del golpe teatral. "l peligro le ha dado alas, genio, energía. "n efecto, las radios del mundo

entero anunciaron ayer a la tarde que, estando la ierra irremediablemente condenada, los hombres dejar!n su

planeta para ir a otros lugares. 6estino %upervivencia, ?peración Milagro, partida fijada para el @ de abril. $a

fecha del primero de abril ha sido evitada por escaso margen, con ra&ón.

6esde esta ma#ana, las f!bricas del mundo entero construyen cohetes. *abr! cohetes para todo el mundo.

=ncluso para los perros y los canarios. 4ada persona tendr! derecho a una sobrecarga de A Bg. de equipaje. oda

actividad comercial, industrial o intelectual se detiene oficialmente en el día de la fecha y la partida general se

convierte en la única obsesión de todo el mundo.

"sas revelaciones me sirven de lección. *abía subestimado las facultades creativas del cerebro humano. *abía

olvidado que ese mismo cerebro puede crear los laberintos burocr!ticos m!s estrafalarios y las relojerías m!s

complejas. 3 del mismo modo que puede resolver los teoremas contenidos en las contribuciones directas, puede

tambin, cuando es necesario, hacer juegos malabares con las ecuaciones de las grandes imposibilidades. 2cabade probarlo. '4ómo imaginar que se trata del mismo cerebro) Poco importa, de todas maneras7 pensó, ergo

vivir!. %ólo me resta desear buen viaje a los habitantes de este planeta. %i son lúcidos, pueden partir sin pena.

"ste planeta no valía en absoluto la publicidad que le habían hecho. %u color verde era m!s bien de gusto

dudoso, sus paisajes no tenían nada particularmente e-cepcional, su cielo era feo cuando estaba claro, triste

cuando estaba lluvioso, y su clima dejaba mucho que desear. %in duda encontrar!n en otra parte un mundo m!s

satisfactorio. "s cierto que los hombres se las arreglar!n para arruinar en poco pla&o a los mejores. Pueden huir

de su mundo natal, entend!monos, pero nunca abandonar!n su verdadera patria7 la demencia y el mal gusto. 2un

si se van m!s all! del sol de este mundo.

25 de marzo


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$e deseo buena suerte me dijo uno de los funcionarios.

$e dese lo mismo. otal, entre hermanos, 'verdad)

6espus de que salieron me asombró no haberles oído entonar un c!ntico.

Mi boleto de partida es verdoso, marcado con sellos, afiligrano, ilustrado y se parece mucho a un cheque.

%iempre esa obsesión por ser bancario, en consecuencia solemne. '*asta qu estación del espacio vamos con

este billete) No est! indicado. Pero no hay que preguntar demasiado, ya que el viaje es gratuito. "so tambin

parece casi increíble. 9+arios millones de Bilómetros a costa de la humanidad; 4uando uno piensa lo que costaba

el Bilómetro la semana pasada. "l boleto menciona igualmente a qu &ona debo dirigirme el @ de abril y, por

medio de una ingeniosa red de números y letras, da indicaciones precisas sobre el camino a seguir para alcan&ar

el cohete que me asignaron.

4amino que, por otra parte, no seguir, ya que nunca tuve la intención de partir. 'Por qu) 92h; sí, 'por qu)

6igamos que tengo vrtigos o que la altura me descompone y no hablemos m!s del asunto.

*ay que aclarar que el recha&o a partir ha sido previsto. "n semejante caso, dice la circular, es necesario

devolver el billete sin demora a las autoridades. 2sí ser!. %in demora, efectivamente. Ni siquiera quiero apostar

la cuestión a cara o cru&.

'(u hacer ahora que todo est! decidido, reglamentado) "n verdad ya no me queda nada por ordenar en mi vida.

No tengo que enfrentar el menor problema. odo se reduce a lo esencial, es decir a nada. %in duda voy a

aburrirme en estos últimos días. 2unque estoy acostumbrado. 6esde que me encarcelaron, compruebo que no me

aburro mucho m!s que lo que me aburría asumiendo diversos empleos. 2l menos aquí puedo adormecerme en mi

indolencia sin tener que poner cara de que cumplo con mis obligaciones.

28 de marzo

3a no pasa nada.

Pero ver de cerca el fin del mundo. Me han anticipado, en efecto, que aun si no deseo disfrutar de mi billete de

partida, me liberar!n, a pesar de todo, la víspera del -odo general. "l primero de abril, por lo tanto. "stoy feli&

de saber que este importante incidente cae un primero de abril.

1º de abril

2quí estoy, libre,

"n regla, con plena conciencia. "s e-tra#o pensar que cumplí con mi deuda ante la sociedad7 un mes de

detención por haber cometido un asesinato. No es caro.

? sea que me quedan cuatro días de vida. 3 dentro de dos días tendr todo un mundo por compartir con los

pocos habitantes que, como yo, se nieguen a irse. Parece que no habr! muchos. =ncluso los ancianos quieren irse,

huir, escapar. $os arruinados, los impotentes y los paralíticos tambin. +ivir. No se piensa m!s que en eso. Nunca

conoció la fe en la vida un auge tal. odas las miradas giran al mismo tiempo hacia el cielo. 6etalle desalentador7

est! nublado desde hace una semana. $a religión ha forjado nuevas consignas y, embanderada en su eterna

liturgia, receta. $as iglesias recha&an el mundo y el agua bendita corre a borbotones. "l Papa habla al mundotodos los días, sus delegados todas las horas, y cada hombre siente tal temor del silencio que se pega día y noche

a los innumerables hilos elctricos de la radio o la televisión. Por m!s vivos que se encuentren, me parece que

hacen en verdad demasiado ruido. "sto sin contar el estruendo de acero de los innumerables camiones que pasan

por las calles de la ciudad, transportando todo un mundo de pie&as sueltas hacia los cohetes erguidos, hier!ticos,


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en la campi#a de los alrededores.

*e ido a verlos por curiosidad. *abía centenares, clavados al suelo como gigantescas estacas met!licas,

apuntando al cielo, amena&antes, mudos, recreando un decorado similar a un singular huerto de catedral. %u

número, su altura, su densidad, todo impresiona y fija literalmente la mirada en el fondo de las pupilas. *ay que

felicitar a los tcnicos. 4eleridad de ejecución, perfección de la empresa, terminación del trabajo, armonía de las

líneas8 pusieron todos los triunfos en su juego. No s dónde encallar!n estos cohetes, no s incluso si los seres

vivientes soportar!n este viaje, pero al ver este material uno confía y est! dispuesto a creer que llegar! lejos.

6e todos modos estas m!quinas decoran agradablemente la campi#a particularmente desagradable de esta región

y se podría lamentar incluso que 6ios no haya creído necesario utili&ar el cohete como elemento de una

naturale&a que, como suele decirse, deja bastante que desear.

*e vuelto favorablemente impresionado. *aber llegado a transformar en pocos días un sue#o de muchos siglos

en una realidad es una proe&a que marcaría una fecha en la *istoria de la ierra si no fuese justamente que la

*istoria se detiene en esa fecha. 2 pique. '%obre qu vacío) 'endr! la *istoria ocasión de decirlo)

No menos impresionante es el rigor concentracionario con que se lleva a cabo la evacuación de la capital. Pues

los habitantes dejan la ciudad esta tarde para encerrarse en los cohetes antes de medianoche. $a partida se har!

ma#ana, al amanecer. %iempre se parte al amanecer, para el cadalso, para el infinito. "n las rutas barridas por

hordas de vehículos que parecen moverse como enormes aspiradoras, ningún p!nico, ningún desorden. $os

altoparlantes instalados por todas partes aúllan himnos marciales entrecortados por órdenes lacónicas. 2hogando

sus temores secretos, atiborrados de esperan&a, inflados de estrpito, los habitantes se dejan llevar hacia los

centros de partida donde ser!n separados, desinfectados, envasados e introducidos en los cohetes como fardos de

algodón.

'(u decirles)

"sto no es m!s que un hasta la vista, hermanos míos.

2 de abril

%on las dos y media de la ma#ana.

$a ciudad, siempre desierta a esta hora, no ha cambiado de aspecto. %e podría creer que no ha pasado nada y que,

dentro de algunas horas, vendr!n a retirar los cestos de basura. $as calles siguen iluminadas. "s la primera ve&

que los hombres salen de viaje olvid!ndose de cerrar el agua, el gas y la electricidad detr!s de ellos.

*e tomado un caf negro en un bistrot donde fui servido por el patrón mismo.

'/sted no parte) le pregunt.

No me dijo. $os viajes me aburren. Ni siquiera cono&co las afueras. Calta de curiosidad sin duda.

$uego subí a un coche abandonado y rod hacia los suburbios de la ciudad. 6espus alcanc la campi#a. (uiero

ver todo. $a partida para empe&ar, el fin del mundo a continuación. 3 ma#ana ir incluso a ver una última

película si es que llego a poner en marcha el aparato de proyección.

*asta el momento el espect!culo de la partida no ofrece gran inters. 6e los cohetes no se divisa m!s que una

multitud de puntos verdes y rojos. "n alguna parte, una vasta torre de vidrio, probablemente la torre desde dondecontrolar!n la partida. 2cerc!ndose m!s el conjunto evoca un aeropuerto. Nada e-traordinario.

Ningún ruido en ninguna parte. $os pasajeros est!n todos encerrados en el interior de los cohetes. /n silencio de

tal densidad que es casi increíble pensar que toda la vida de una ciudad se encuentra comprimida en esas


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m!quinas muertas.

%on las cuatro de la ma#ana. $a partida se llevar! a cabo de un momento a otro.

2guardo la apertura de los infiernos, una tormenta a ras de tierra, un ciclón de llamas y rugidos, eldesencadenamiento de todas las furias atómicas del siglo DD. Pero aguardo en vano. %ólo el silencio responde a

las tinieblas, como un reflejo helado. 6e pronto percibo algo8 un silbido difuso, insinuante, pero apagado por

toneladas de blindaje.

6ebe ser el preludio. +a a e-plotar el suelo y los cohetes desfondar!n el cielo. Pero nada llega, nada se mueve,

nada tiembla. Nada m!s que el silbido, m!s discreto que nunca, contenido insidioso. 6espus, a las 5 y 0E, nada

m!s. "l silbido ha cesado.

"l silencio.

No pasó nada. No despegó ningún cohete. 6ebe haber algo podrido en el mundo del !tomo. Pero aguardo. Nunca

se sabe. /n simple desperfecto, qui&!s. ? un mal contacto. ? un simple error de maniobra. '3 si los cohetes enve& de despegar entraran en las entra#as de la tierra)

Pasa un cuarto de hora y es entonces cuando veo dos hombres saliendo de la torre de control. %e dirigen hacia la

ruta. Me uno a ellos. ienen el aspecto de los obreros que han hecho horas e-tra y vuelven al hogar fatigados y

un poco aturdidos.

'%e perdió la partida) me pregunta uno de los dos hombres al verme.

*abía venido a ver, simplemente. Pero me decepcionó. No ha pasado gran cosa, 'verdad)

'/sted cree) %in embargo todo marchó bien.

$os enfrento. +eo que uno de los dos sonríe. 3 comprendo todo en ese instante. 4omprendo que, en efecto, todo

se ha desarrollado normalmente, según el plan previsto. Partir, hay distintos modos de partir. 4on y sin

esperan&a.

Pero los cohetes est!n siempre allí digo, sabiendo perfectamente lo que van a responderme.

%í, siempre est!n allí. Nunca fueron concebidos para ser lan&ados al espacio. 2parentemente, uno diría que son

cohetes, pero en realidad son c!maras de gas.

C=N

partir es morir

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