::,:l:,.:i,,rr:ii,,.rf.r,.i . ASABAN pOCOS minUtOS,1.,)¡r1l,1.,1rr',il''ll;,¡l de laS dOS de la tafde.,1 ,,ilr ¡.1-.,1,::r.rr,r.ll Kenneth Arnold, un hOm-..;¡',¡'.,1 ''"'"' bre de negocios de Boise,rl,r..,l"' ldahO, VOlaba a bOfdO desu avioneta Catlair por las cercaníasde Chehalis, en el estado de Was-hington. Parlicipaba en las tareas debúsqueda de un avión de transporteC-46 que se había estrellado en lazona. Todo transcurría con normali-dad hasta que, de repente, un extra-ño destelio sobre el cielo captó suatención. Y, cuando miró a su izquier-da, pudo divisar una hilera de nueveobjetos metálicos que sobrevolabanlas nevadas cumbres del monte Rai-nier...

Según explicaría posteriormente,lós objetos -que se movían a gran ve-locidad- presentaban una curiosa for-ma que describió como un "plato quese hiciera saltar sobre el agua", ex-presión que fue literalmente recogidapor los periodistas que le esperabanen el aeropuerto y que previamenteya habían informado por radio de lainusual aventura vivida por este hom-bre de negocios.

Aquello fue el principio. Desde en-tonces, el 24 de Junio de 1947 seríarecordado como una fecha clave: elinicío de la "era" de los platillos volan-tes, a pesar de que los objetos avis-tados pol'Arnold no tenían precisa-mente forma de platillo, sino de

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boomerang. Y también desde enton-ces, ya nada volvería a ser como an-tes. Por su extraordinaria importanciay dimensión, elfenómeno OVNI esta-ba llamado a ser el enigma númerouno de la ciencia actual, atrayendo elinterés de numerosos investigadoresy universidades dispuestos a inveftirsu tiempo y su esfuerzo *algunoshasta su dinero- para averiguar quéeran y de dónde venían esos inquie-tantes artefactos.

Como no podía ser menos, el fe-nómeno interesó de inmediato a laFuerza Aérea Norteamericana, másconocida como USAF (lJnited StafesAir Force\, que pronto lo renombrócon las asépticas siglas de UFO (Uni-dentified Flying Saucer), o lo que es lom¡smo, Ob7'etos Volantes No ldentifi-cados, es decir, OVNls.

Quedaba claro, pues, el interéssuscitado por los OVNIs en el Gobier-no norteamericano tanto en su ver-tiente "desconocida" como en la quepodría afectar -según se pensó en unprimer momento- a la seguridad na-cional; no en vano muchos estabanconvencidos de que aquellas naveseran auténticos prototipos enemigos.

Fue así como los organismos gu-bernamentales se pusieron "manos a

la obra" para tratar de explicar -inútil-mente y siempre respondiendo a in-tereses muy concretos- qué eraaquella realidad incipiente, dando ori-gen a estudios e investigaciones co-mo el Proyecto Sign (30 de Septiem-bre de 1947) o el ambicioso Proyecto

Condon (publicado en 1969).Hoy sabemos, por ejemplo, que

este último -posiblemente el estudiooficial más importante realizado enestos cincuenta años- no fue másque una "puesta en escena" de laFuerza Aérea para desacreditar tantoal fenómeno OVNI como a sus testi-gos. Et responsable del mismo, Ed-ward U. Condon, quien apenas man-tuvo contacto con su equipo detrabajo, no tuvo ningún problema enrubricar las 1.485 páginas del informeque llevaba su nombre y que finaliza-ba con una afirmación lapidaria: "Na-da procedente del estudio de los OV-N/s en los últimos veinte años hapodido añadirse al conocimientocientífico". Conclusión, como vere-mos, tan controverlida como alejadade la realidad.

En este sentido, cabe destacar lasdeclaraciones efectuadas respecto alcitado proyecto por el propio mayorde las Fuerzas Aéreas norteamerica-nas, Donald Keyhoe, quien se mani-festó públicamente en contra de lasconclusiones del mismo en los si-guientes términos: "Lamento que elcomité haya examinado sólo 50 ca'sos enfre 1947 y 1967 y que difícil'mente puedan considerarse entre losinformes de confianza e inexplicables,cuando nosotros tenemos de 10.000a 15.A00 casos de tales característi-cas".

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Tiene razón el mayor. Aunque cier-tamente la casuística OVNI está pla-gada de episodios nada claros, haYotros que, después de haber sido de-bidamente investigados, han arrojadonueva luz no sólo sobre la naturalezadel fenómeno, sino también acercadel conocimiento delser humano.

Este es, por ejemplo, el caso delos estudios llevados a cabo Por elpopular astrofísico y experto en estetema Jacques Vallée, cuya figura esunánimemente elogiada tanto por loscreyentes en los OVNIs como Por losescépticos. En su libro Confronta-fions escribió algo que convendría te-ner siempre presente a la hora deabordar este tema: "Etfenómeno OV-N/ -declara- es una oporfuniciad dehacer buena ciencia. lJn esPírituabierto es esencial en esta bÚsqueda.Y no es fácil mantener tal aPertura,porque el cerebro humano se lanzafácilmente a conclusiones precipita-das a partir de datos insuficientes".

Una apertura mental que, sin em-bargo, no es suficiente. Vallée insisteasimismo en algo que debería ser elmodus operandi de cualquier investi-gador OVNI que se precie y que, des-graciadamente, no en todos los ca-sos se cumple. Para este exPerto esimportantísimo que el estudioso tra-baje siempre sobre el terreno, es de-cir, en el emplazamiento donde tuvie-ron lugar los hechos, interroguepersonalmente a los testigos y tratede buscar datos e indicios constata-bles de carácter físico o biológico.

Y es precisamente en estos datosconstatables donde hoy centran suatención los científicos, conscientesde que la simple catalogación de "lu-ces extrañas" sobre el cieio ya noconduce a ninguna parte. Porque,como sucede con todo, las manifes-

taciones del fenómeno OVNI tambiénhan cambiado considerablemente alo largo de estos cincuenta años. Losprehistóricos platillos volantes hanido dando paso a una amplia gamade luces, formas y extraños aterriza-jes para, a partir de la década de lossesenta, desembocar en un fenóme-no ciertamente llamativo: el de lasabducciones, o lo gue es lo mismo, elsecuestro de humanos por parte delos tripulantes de estas naves. Y conlas abducciones, el enigma OVNI ad-quiere una nueva dimensión, pues lasconsecuencias tanto psíquicas comofísicas derivadas de estas experien-cias pueden ser -y lo están siendo-estudiadas por los científicos.

Asípor ejemplo, un equipo de bió-logos auspiciado por el Gobiernofrancés ha realizado un complejoanálisis sobre los cambios biológicosexperimentados por quienes han pro-tagonizado episodios ufológicos.Concretamente, estos expertos hanestudiado la parálisis que muchos

sujetos padecen después de un en-cuentro cercano o una abducción. El

doctor Daniel Mavrakis observó queen estos casos la parálisis no afectaa la postura, por lo que la persona escapaz de mantener el equilibrio aunestando de pie. Después de variosanálisis, Mavrakis llegó a la conclu-slón de que esta ausencia de movi-miento -que él designa como "akine-sia"- incide directamente sobre elsistema nervioso central, aunque, porel momento, el doctor no ha queridopronunciarse sobre su origen, Hayasimismo otros experimentos Quehan ayudado a comprender algunosde los cambios biológicos experi-mentados por las personas que ase-guran haber sido abducidas. Es elcaso de determinadas investigacio-nes encaminadas a conocer la in-fluencia de los campos magnéticossobre el comportamiento y cerebrohumanos. En particular los trabaiosde Hodgkin han puesto de relieveque nuestras células producen y ab-sorben diferentes iones en la acciónmetabólica y, según los estudios deeste científico francés, los camposelectromagnéticos inhiben los reflejosy las defensas e inducen al sueño.Efectos éstos muy comunes en losdenominados procesos de abduc-ción.

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Por su parte, la Universidad Lau-renciana de Ontario, Canadá, intere-sada en dar explicación racional acierlas observaciones OVNI y en con-creto a determinados ePisodios deabducción sucedidos en el marco delas grandes ciudades, también ha lle-vado a cabo sus propias investiga-ciones. En este caso se indujeron ar-tificialmente visiones y alucinacionesauditivas y cenesfésrcas (sensaciónde levitar) mediante Ia aplicación depotentes campos electromagnéticosen el cerebro humano. MichaelPer-singer utilizó como sujeto experi-mental a la doctora"Susan Black-more, quien tras la exPerienciadeclararía: "Noté cómo dos manosagarraban mis hombros Y me tirabanhacia arriba. Después experimenté lasensación de atravesar el techo enmedio de una sensación de ingravi-dez absoluta. Pasé mucho miedo".Sensaciones, como vemos, muY si-milares a las que dicen haber experi-mentado la mayoría de los supues-tos abducidos.

Pero Persinger va más allá. Élsostiene que, bajo cieñas condicio-nes, los campos magnéticos de laTierra podrían afectar a los seres hu-manos de igual modo. En esta misma

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línea cabe destacar la hipótesis pro-puesta por Albert Budden, autor delensayo Alergias y extraterrestres, pa-ra quien las abducciones serían "e/producto mental y fisiológico de unaserie de enfermedades ambientalescompartidas por cerca del 20o/o de lapoblación".

Según Budden, el aumento decampos electromagnéticos -origina-do por la proliferación de electrodo-mésticos y demás aparatos- sumadoa las fuertes cargas geomagnéticaspropias de ciedos lugares, está con-tribuyendo a mutar nuestros meca-nismos de percepción, generandodeterminado tipo de imágenes y si-tuaciones cuyo fin sería ayudar adescargar la ansiedad provocada porestos factores. Budden, siguiendocon su argumento, asegura que quie-nes han vivido experiencias de ab-ducción sufrirían en realidad lo que éldenomina una "hipersensibilidadeléctrica" y "alergia múltiple" que, enmuchos casos, explicaría el amplioelenco de fenómenos extraños ob-servados tras las experiencias ufoló-gicas.

AVISTAMIENTOS YrENóMENOS NATURALES

La electricidad fue también labase para otro estudio científicode enorme relevancia. En el vera-no de '1996 varios equipos de in-vestigación instalaron telescopiosy fotómetros muy sensibles a lospies de las Montañas Rocosas, elmás importante sistema monta-ñoso de América del Norte. Sehabían dado cita allícon la inten-ción de demostrar que lo que mu-chos testigos -entre ellos algunosastronautas- han identificado conOVNIs son en realidad determina-do tipo de relámpagos (denomi-nados ELVES) que se producenmuy por encima de las tormentas.De hecho, entre los papeles quemanejaban destacaba un informedonde se aseguraba que la expe-riencia vivida el 24 de Noviembre

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de 1969 por la tripulación del ApoloX// pudo ser uno de estos fenómenoseléctricos.

Todo sucedió mientras la cápsulaespacial se hallaba sobre la lndia. En-tonces Pete Conrad, Dick Gordon yAllan Bean informaron a Houston de

De izquierda aderecha, el mayordel EjércitoDonald Keyhoe,el pro;fesorEdward Condony el astrofísicoJacques Vallée,tres importantesnombres propiosde la ufología.

que estaban contemplando una luzroja fulgurando sobre la Tierra: "Setrata de una luz fija, muy potente ytan grande como Venus" exclamóDick, mientras oteaba con los pris-máticos.

Pues bien, según los científicosinstalados al pie de las Rocosas, elfenómeno observado por los astro-nautas no habría sido otro que unELVES: relámpagos que surgen a 75o 95 kilómetros de altitud y que sonmucho más brillantes y grandes quelos convencionales. En palabras delinvestigador Walter A. Lyons se tratade una especie de "anillo de luz del-gada expandiéndose hacia fuera". Yañade: "Es como un platillo volantede 400 kilómetros de diámetro". Esteequipo trabaja actualmente en el es-tudio de los cambios de tono y colorobservados en los ELVES, así comoen la incidencia que este fenómenotiene tanto en la meteorología plane-taria como en la capa de ozono.

Irn§ TErvra slrE INTEaE§a§ LO§ 6TENTiTICG§

Todo lo cual viene a demostrar, almenos, un hecho relevante:que los científicos de hoy, encontra de lo que mucha gentecree, están realmente preocu-pados por eltema OVNI.

Una inquietud que ha que-dado perfectamente reflejadaen la encuesta auspiciada porel astrofísico Bernhard Haisch,editor del Journal of ScientificExploration (JSE) -una publica-ción auspiciada por la Universi-dad de Standford-, donde2.61 1 astrónomos estadouni-denses fueron preguntados so-bre la necesidad de investigarseriamente el enigma OVNI. Ensus respuestas, el 56% de elloscontestó afirmativamente, el24% dijo que posiblemente eranecesario tal estudio y, final-mente, sólo el 20% manifestóque era perder el tiempo. 'Estenivel de interés -explica

Pertenece a: Víctor Fco. Carrasco Ferradalnvestigador OVNI

En Scribd me encuentras en/comoVictor Francisco Carrasco Ferrada,en VICUFO, en VICTOR o VICUFO2

Haishc- muestra el potencial de unaestructura profesional adecuada parala investigación de este fenómeno".El estudio pone asimismo de relieveque, generalmente, los científicosnunca leen o se informan acerca delas evidencias sobre OVNls, motivopor el cual afirman que no las hay.

EVIDENGIAS:HABERLAS, HAYTAS

Pero no es así. Para quien quieraencontrarlas, existen. En este senti-do, algunos investigadores han cen-trado su atención en las "heridas"provocadas por los contactos OVNI,encontrando que los casos de con-juntivitis y, sobre todo, quemaduras,son muy frecuentes.

El ejemplo más conocido de estetipo de evidencias fue dado a cono-cer públicamente en 1981 Por el in-vestigador John Schuessler en la re-vista especializada MUFON UFOJournal, donde se hacía eco de unestudio realizado por !n experto entecnología nuclear. Este Ponía demanifiesto la existencia de radiacio-nes -cifradas en 50 kilowatios- en uncaso de contacto OVNI conocido co-mo Cash-Landrum y ocurrido en Di-ciembre de 1980.

Otro trabajo muy concienzudo ti-tulado UFO effects on PeoPle, obrade James McCampbell, concluYeque muchas de las quemaduras enla piel sufridas por los testigos deOVNIs no han podido ser produci-das por radiaciones ultravioletas, yaque en ocasiones han aparecido enlugares tapados por la roPa. Aun-que, añade, podrían ser exPlicadaspor las micro-ondasi "A una longi-tud de onda de un centímetro -di-ce- se puede notar un cierto calorque representa alrededor de una dé-cima parte del flujo de la energía so-

Largometrajes como "Mars Attacks!" (fotograma de la película en la parte, supertor)no hacin justicia a la actitud consen,adora de los científicos que actualmente

investigan el fenómeno OVNI.

lar".Tomando como referencia estedato, McCampbell puede calcular laintensidad de los campos energéti-cos provocados por la presencia deOVNls.

Estudios, todos ellos, que de-muestran la vigencia de un fenómenoque no ha dejado de sorprendernos

desde que tuviera lugar aquella mÍti-ca observación de Arnold y que aúnhoy sigue despertando el interés y lacuriosidad no sólo de miles de perso-nas de todo el mundo, sino tambiénde estamentos e instituciones científi-cas.

En definitiva, cincuenta años de unfenómeno que, a su'manera, tambiénha contribuido al desarrollo de laciencia. Porque, aunque obviamenteno ha sido posible encerrar a ningúnplatillo volante en un laboratorio, locierto es que cada vez sabemos másde las pautas y consecuenbias queacompañan a estos objetos no identi-ficados tanto a nivel biológico comofísico, meteorológico, psicológico eincluso sociológico. E, independien-temente de su origen, los OVNIs hanservido, sobre todo, para abrir unanueva puerta a la mejor comprensióndel ser humano y de su entorno, dosfactores clave para el despegue deuna nueva conciencia. *

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¡NUMERO rOO!IEN meses de camino en compañía. Cien números paradespertar, juntos, un poco más a Ia vida. Cien pasosque nos han acercado a todos a la comprensión de lasinfinitas y complejas man¡festaciones del Espíritu- Por-que todo§, hoy, somos un poco más conscientes. To-

dos, hoy, somc>s Lrn pocs nr'¡ás sabios. Todos, hoy, tenemos mu-chas más interrogantes que antes" Todos, hoy, estamos más cercade la l-uz. Por eso también todos, !toy, vivimos la vida con unape!'sFecti\ra más ampl¡a, con una nueva §onciene¡a, con un innega-ble sentimiento de pertenensia a una m¡sma Realidad, a un mismoEspíritu, a una m¡sma Vida manifestada" Muche¡s no serán proba-blemente eonsc¡entes de ese crecim¡ento ;nterior, de ese eamb¡ocual¡tativo de concienc¡a, de ese conocimiento que en pequeñaspíldoras ha ido aposentándose en su subconsc¡ente a lo largo deestos año§, mes a ryle§, lectura a lectura. Pero todos quienes he-rr¡os carrlinado juntos en esta aventura que un día iniciamos haceahora c¡en meses hemos crecidc en todos los aspectos de nuestravida" Ponque, sin apenas darnos cuenta, henr'¡os camb¡ado nue§trape¡"cepc¡ón del ¡'nundo y hemos ayudado a carnbiar la de otros. Yhenros aprend¡do día a día, todos, a escuchar de verdad a los de-más, a ser más so¡¡darios, a ser rnenos dogmático§, a pensar pornosotros m¡smos, a no dejarnos rrlan¡pular, a estar ab¡erto§ a nue-vas ¡deas y a desm¡tiflcar las creencia§ comúnmente establec¡dascorl1o verdades eterrnas" Y lremos aprend¡do que Ia vida es una es-cue¡a donde cada día elue pasa, si §omos conscientes de ello, senos ofreee la opcntunidad de aprénder ur¡a lecc¡ón nueva, de mi-rarnos en los demás, de aprender grac¡a§ a ellos' Porque hoy sa-bem<¡s que s¡n les «rtros, s¡n todss y cada uno de qu¡ene§ nos ro-dean, no podríamos avanzar en el carn¡no de la evolt"lción porquenos faltaría !a posihilidad de exper¡mentan y que e§ una falacia cre-er que o'alguien se ha hecho a §í m¡srno". ¿Cómo saber lo que esla amistad, el án-rstr, el sd¡o, la alegría, la desazón, e.l desánimo' laeuforia y tantas otras rnan¡festac¡one§ de nuestro espír;tu, denuestra mente, de nuestro corazón, sin los otros? Recordemos,adenná§, q[-Ne erx este proceso de crec¡rn¡ento no basta con dar pa-sos que un día nos b¡"Iedan conduc¡r hasta la n'leta, sino gue cadapaso ha de ser [Jna ryleta, sln dejar pon ello de ser un paso. Y que-como decía l\ntonio Macl"rado- lo.s unicas que e§tán siempre devuelta de todo sor? ros que no han ido nunea a ninguna pañé,

Y ner importa que aún haya mucha Eente que no eomprenda. Noimporta q{.¡e quaenes vive¡'¡ de espaldas a Ia Iuz sigan viendo sól<¡las sombras que se reflejan frer"¡te a é1, como en la famosa alegoríade Ia cueva de Platón. Porque lo unico importante es que un día,todos, saldrán tarnbién de la caverna y podrán comprender queaquello en lo que s¡empre habían creído no e§ rYr᧠que un pál¡doreflejo de una verdad rnucho más grande y luminosa de Io que hu-bieran podido siquiera imaginar. Pero, mlentra§, no ohr¡dernos quehay rnucho dolor en el mundo -fruto de la incomprens¡ón- y quenunca se da tanto eorr¡o cuando se dan esperanzas.

du/ósAuáDE LqcE\cLl,,esti cfitl,adaporh o. J. D.

Printed in Spain -Jun¡o de 1997 - D. L.: l\i1.3.482-1 989.

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ENTREVISTA A JOSÉ ANTON¡O CAMPOYA lo largo de más de dos años de discreto silencio, José Antonio Campoy,director de MAS ALLA DE LA CIENCIA, ha venido entrevistando de formaininterrumpida al presunto guía extraterrestre del conocido Grupo Aztlán,singular personaje que responde al nombre de Geenom y afirma habitar enun planeta que orbita alrededor de la estrella Alfa B, en la Constelación deCentauro. Nos lo cuenta Garmen Quintana.

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Di*en que ffiüris en 1S§S y qu* fue l* reenear*aeión r.lel empera**r ü¿tec§üuauhl*§n':oe, encersad* de le r*g*m*ración espiritual de Méxie*^ Fla sid* lla-maeia la {¡ltim* reina de Méxic* y scbre s* vida, narrada pür el *§critarVela**o-Fiña, se hgn d*satad* lcs más sr¡*sr¡didas eüntrsversias. Un r*port*jerJe ür:ncha Labarta.

Japóat cemienaa a de$pertar de cu letargr, L* antigua tradieión r*$urge üürrfu*rxa *nn urrfi ilrspuesta revclueionaria para el próxrm* sigl*: el a¡'t* de l*pñtr)r*¿ff ¡r*i¡l*, Austeridad frente a *onsumisnro, la fuerza del eamurti $¡Sus vivñ.L.tn trahain de Monts* Llor"

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