2

Margarita Guevara Alvarez, trabajadora incansable:

que he llevado”

“Estoy agradecida

de la vidaSin proponérselo al principio, porque al fin de cuentas

no ha sido una mujer que se traza metas para nada –

como ella misma lo confiesa-, Margarita Guevara Alvarez

llegó a inicios de los 80 a trabajar como secretaria en

uno de los organismos auxiliares que tenía el Frente

Sandinista en esa época, y al poco tiempo se convirtió

en asistente inseparable o casi indispensable de los

pocos jefes que tuvo, pues ninguno

quería prescindir de

ella.

“Me fascinaba mi trabajo, trabajábamos con una mística, con amor al trabajo”, dice, recordando los elogios que le contaban que decían sus responsables de su eficiencia y

entrega en las tareas que le encargaban, siempre respondien-do y resolviendo problemas o situaciones que se presentaban sin importar que fueran en la madrugada de cualquier día de la semana.

Cuando nació en Matagalpa hace 54 años, parece que a sus padres Trinidad Guevara Ruíz y Olivia Alvarez Alvarado la sintieron y vieron en forma de flores y rosas, porque le pusieron Margarita Rosa; aunque a ella todavía sigue sin gustarle su nombre, pues precisamente le suena a jardín muy florido, quizás porque “mi vida no ha sido tanto así”. Tiene cuatro hermanas y tuvo un hermano que ya murió, al igual que su papá que fue médico y como tal colaboró con el Frente Sandinista con medicamentos y curando a los guerrilleros heridos en los años duros de la lucha sandinista contra la dictadura somocista. Su mamá, “todavía vive gracias a Dios”, fue una destacada maestra de generaciones que hace algunos años la honraron con la Orden Ramírez Goyena.

Ella, su mamá y sus hermanos nunca se dieron cuenta que el doctor Guevara colaboraba con el Frente hasta que se murió de un paro cardíaco, aunque a la profesora Alvarez el coronel de la guardia somocista Enrique Bermúdez

ya le había advertido que su esposo estaba dentro de

una lista especial para llevarlo preso. “Gracias a Dios, El se lo llevó primero sino quién sabe, lo hubieran masacrado”, señala.

Margarita Guevara con el doctor José Pasos

Marciaq.

“Cometí la burrada de casarme”

3

Cuando Margarita y su familia se dieron cuenta de lo que hacía su papá, empezaron a sentir simpatías por el Frente Sandinista; “era difícil no sentir simpatía por el Frente, aunque nunca hubiese trabajado con ellos”, afirma, tras

recordar que su padre fue el único hijo de su abuelo –productor que llegó a tener seis fincas de café-

que estudió y se hizo profesional.

Margarita estudió la primaria y secundaria en el colegio San José, de Matagalpa, pero después no siguió estudiando porque “cometí la burrada de casarme, saqué mi título de profesional teniendo dos varones”. Como el marido le salió violento e

irresponsable, a punta de esfuerzo y tesón ella sola logró criarlos y educarlos

para que ahora fueran profesionales: Mario Alejandro es juez de lo civil en

Matagalpa, y Ariel Enrique Velazquez Guevara es chef en un restaurante de Managua.

Pero Margarita no sólo se quedó con ser bachillera, sino que “mi papá me forzó a sacar el secretariado en la Escuela de Contadores Públicos de Matagalpa”. Esto

le permitió trabajar para poder mantener a sus hijos. Meses después del triunfo de la Revolución, vino a Managua a inicios de los 80 y empezó a trabajar como asistente de la comandante Doris Tijerino en el recién creado Departamento de Relaciones Internacionales (DRI) del FSLN.

Hace poco tiempo “Doris dijo que yo había sido la mejor secretaria que había tenido en su vida, falta de modestia pues”, comenta. Sin embargo, sólo estuvo seis meses con ella porque “me fui a Matagalpa huyendo del padre de mis hijos”. En su ciudad natal estuvo siete meses y regresó a principios de 1982 a trabajar en el mismo DRI de secre-taria de Julio López, que era el jefe de este organismo; el vice jefe era el doctor José Pasos Marciaq, a quien poste-riormente escogió como jefe .

Desde que comenzó a trabajar con el doctor Pasos, Mar-garita asegura que hubo empatía; “es una persona exce-lente, buenísimo, culto, respetuoso, educado, un caballero en toda la extensión de la palabra”, enfatiza las virtudes que para ella tiene su jefe, de quien se separó en 1988 para ser parte del equipo de apoyo del presidente Daniel Ortega, hasta en 1990 cuando el Frente Sandinista perdió las elecciones.

Margarita Guevara durante su casamiento con Gonzalo Bonilla.

El año pasado se volvió a casar tras 16 de años de ser pareja “de un hom-bre muy bueno”, quien al igual que sus hijos ha tenido que aprender a “vivir conmigo muriendo cada día”. Y es que Margarita, desde un inicio asumió el cáncer como parte de su vida, porque muy pronto supo que “uno vive muriendo, se tenga cáncer o no”. Como católica apostólica y matagalpina, según indica, cada día que se levanta y abre los ojos le da gracias a Dios por la vida.

Pese a que ya no puede bailar y leer como lo hacía hasta hace algunos meses, asegura estar agradecida de la vida que ha llevado. “Yo tenía 28 años cuando me detectaron el cáncer, voy a cumplir 54, llevo veintiséis años ganados a punta de actitud, a punta de ganas de vivir, a punta de reírme de las desgracias”, enfatiza esta mujer que, incluso, la muerte y el amor a su esposo Gonzalo Bonilla la han inspirado para escribir poemas.

“Cuando vengas a buscarme quiero que me encuentres, con el sabor limpio cargado de luz… quiero que me en-

cuentres con mis pies ligeros, listos para emprender el largo camino”, re-

cuerda uno de sus poemas dedicado a la muerte. Y a Gonzalo le ha escrito

que “A tu lado he conocido el amor, a tu lado he vivido el amor, a tu lado he creído

en el amor, a tu lado conozco vivo y creo en el amor… Te invito a que volemos juntos por los

espacios inmensos, sobre las olas del mar y a la par del viento, sobre la arena del desierto, y las selvas no descubiertas, volemos juntos y encontremos un mundo donde no haya cabida más que para vos para mí y para el amor”.

Margarita, la militante sandinista y trabajadora incansable, lo único que añora es estar en su oficina de la Contraloría asistiendo a su jefe con la misma eficiencia que lo hizo durante tantos años. Por lo demás, “he vivido como he querido, y como me ha dado la gana, no he sido una mujer de trazarme metas para nada, me he limitado a vivir cada momento y sigo viviendo el día de la mano de Dios que no me abandona”.

4

“El cáncer me dio vida”

Entonces se quedó sin trabajo y se fue para su casa, donde estuvo vendiendo fritanga para sobrevivir, aunque “el Comandante y el doctor Pasos siempre estaban pendiente de mi estado de salud”. Resulta que en 1985 le habían diagnosticado cáncer de tiroides y tenía que ir a La Habana cada seis meses para que le aplicaran tratamiento. “Así estuve viajando durante tres años”, señala.

A los tres meses de estar vendiendo comida en su casa, el comandante Ortega la mandó a llamar para que administrara el complejo de su casa, en la Secretaría. “Por el único que podía dejar al doctor Pasos es por él”, dice, refiriéndose al Presidente. Aquí estuvo dos años bajo la responsabilidad de la compañera Rosario Murillo. Luego

estuvo algún tiempo como subdirectora administrativa del Instituto Monseñor Lezcano y posteriormente regresó nuevamente a trabajar con Pasos.

“Me llamó para que trabajara con él en la Comisión de Etica del Frente y ya no volví a despegármele”, expresa, agregando que actualmente sólo su estado de salud la ha separado del ahora Contralor de la República. No obstante, para Margarita su enfermedad no ha sido ningún obstáculo para permanecer estática y sin ánimos de ningún tipo; todo lo contrario, aunque suena paradójico y hasta irónico, ella está convencida que “el cáncer me dio vida”.

Durante sus viajes a Cuba a recibir tratamiento, aprovechó las estadías

para aprender a bailar cumbia, salsa, merengue. “Imagínense como ha sido de bueno el cáncer para mí que aprendí a bailar”, dice sin asomo de burla. Para ella, esto es importante porque recuerda que en las fiestas que organizaban en su colegio “me quedaba sentada porque nadie me sacaba a bailar y menos cuando ya estaba casada”.

Además de aprender a bailar, se convirtió en una voraz lectora; libro que le caía a las manos lo devoraba de punta a punta, principalmente las novelas y de historia. Ahora casi no lo hace por las limitaciones que le está ocasionando el avance de su enfermedad., pero “ahí vamos, haciéndole huevo”, dice, volviendo a su habitual sentido del humor.

“He vivido como he querido”

5

Elecciones 2011:

Indiscutiblevictoriasandinista

Las elecciones nacionales de Nicaragua se

desarrollaron y culminaron con un alto espíritu cívico,

democrático y pacífico del pueblo nicaragüense este

6 de noviembre 2011, y con una contundente victoria

del FSLN y sus candidatos encabezados por el

comandante Daniel Ortega.

Fredy Franco

C omo era predecible por la opinión ampliamente favorable del pueblo, expresada en las encuestas de opinión de las diversas empresas encuestadoras, da-

das a conocer en el transcurso de 2011, el partido claramente favorito era el FSLN, asignándoles una clara ventaja, lo cual se hizo realidad el día del sufragio con el 62% de votos para el sandinismo y el 31% para el PLI.

Con esta indiscutible victoria, el FSLN recupera -en buena medida- el apoyo político-social-electoral que tuvo en la primera etapa de la Revolución sandinista y que se expre-só en las elecciones de 1984, cuando obtuvo el 67% de los votos.

Así como se derrumbó la derecha en las elecciones del 2011, se derrumbó el mito que ella pretendió establecer en el sen-tido que el FSLN nunca pasaría del 40% del apoyo electoral. Pero la realidad ha demostrado todo lo contrario. Porque con mística, perseverancia, optimismo, organización, com-promiso, con unidad, con un programa popular, vinculación con el pueblo, buen gobierno y solución a los problemas fun-

damentales de los nicaragüenses y de Nicaragua, se avanza, se logra conquistar la mente y el corazón del pueblo.

Y en sólo cinco años, el Frente Sandinista creció del 38% a más del 62% del electorado, representando un salto cualitati-vo que ninguna fuerza política ha logrado dar en Nicaragua.

Ha sido y es limpia, contundente e indiscutible la victoria elec-toral sandinista que es el resultado no sólo de la buena gestión de gobierno, sino también del trabajo de hormiga de los sandi-nistas y de una estrategia de campaña incluyente, no confron-tativa, lúdica, llena de soluciones, de optimismo y de futuro.

Ahora que el FSLN ha gobernado en paz, ha demostrado de lo que es capaz de hacer para construir una sociedad justa y próspera. En cinco años logró reducir de manera importante la pobreza, restablecido los derechos sociales, y dinamizar y hacer crecer la economía con sentido democrático; se ha visto el cambio y el avance del país, pese a los problemas económicos mundiales y las constantes afectaciones de los fenómenos naturales, que igualmente se han enfrentado con responsabilidad humana por parte del gobierno.

El pueblo no olvida la pesadilla de los 16 años de gobiernos neoliberales que hicieron más pobres a Nicaragua y a los nicaragüenses, que saquearon el erario público, que derrum-baron lo construido del patrimonio público y del Estado na-

Trabajo de hormiga

CCC -

Jairo

Cajin

a

Presidente Daniel Ortega.

6

Con los resultados de las elecciones 2011, el FSLN logra la mayoría política en el país, que era el propósito principal de su estrategia, la cual es una premisa básica para pro-fundizar los cambios que necesitan la sociedad y la nación nicaragüense. El resultado electoral ha empoderado más al pueblo y le ha dado más responsabilidad al FSLN para conti-nuar desarrollando el modelo de desarrollo bajo el concepto Cristiano, Socialista y Solidario, la profundización del po-der ciudadano, de la democracia directa para trascender la democracia representativa y hacer cada vez más realidad el concepto de Pueblo Presidente.

Y como lo ha dicho Daniel, la victoria no debe llevarnos a que “se nos suban los humos a la cabeza”, ni volvernos “fachentos”, sino como siempre: humildes, fraternos, solidarios y dedicados siempre a la causa del pueblo y de la Revolución; porque lo que nos diferencia esencialmente de la derecha es que aspiramos a un nuevo sistema que se sustenta en nuevos valores como la igualdad, la justicia, la solidaridad y la dignidad humana: el socialismo.

No hay que olvidar que este proceso electoral nacional 2011 se desarrolló con todas las condiciones democráticas y de libertad como ninguna otra en la historia de Nicaragua, con toda la constitucionalidad y legalidad requeri-da, pese a la campaña de deslegitimación de la derecha que, desde el inicio del proceso, se sabía derrotada y por eso comenzó a gritar las mentiras que ya conocemos sobre un supuesto fraude.

La elecciones nacionales 2011 en Nicaragua son elecciones constitucionales, legales, validas y legítimas, porque:

1-Fueron convocadas y realizadas bajo los preceptos constitucionales vigentes. Incluso en esta elección se logró superar la antinomia (contra-dicción) jurídica existente desde la reforma constitucional de 1995, en que la parte dogmática (de principios y derechos) de la Constitución de 1987 no limitaban el derecho a elegir y ser electos, pero los que hicieron la reforma limitaron ese derecho y prohibieron la reelección a los alcaldes y al Presidente de la República pero no a los diputados, y al hacerlo tampoco modificaron los preceptos constitucionales de elegir y ser elec-tos sin ninguna restricción.

cional, que hicieron retroceder la economía y los índices de desarrollo humano construido por la Revolución sandinista. En 2006 y 2011 el pueblo le pasó la cuenta a los neoliberales y sus representantes: las fuerzas de derecha libero-conserva-dora aglutinada en el PLI, el PLC, el ALN, el Partido Conser-vador y otros.

Con estas elecciones las fuerzas del segundo y tercer lugar en las elecciones 2006 fueron derrotas de manera apabullan-te, quedando el PLC con un peso electoral del 5% y el ALN -prácticamente desaparecida como partido político- con menos del 0.25% del electorado.

El FSLN logró ganar las cuatro elecciones simultáneas: la de Presidente y Vice-Presidente, la de Diputados Nacionales, Departamentales y ante el Parlamento Centroamericano; alcanzando 63 de los 90 diputados en la Asamblea Nacional, lo que representa el 70% de los parlamentarios y que le da la mayoría calificada para poder atender los requerimientos de nombramientos constitucionales y las mismas reformas constitucionales que se requieran, ya no digamos la elaboración de aquellas leyes que favorezcan al pueblo, el fortalecimiento del papel del Estado y la profundización democrática del país.

Participación amplia y pluralista

El pueblo más empoderado

Es por eso que la Sentencia de la Cor-te Suprema de Justicia de octubre del 2009, logró superar esa contradicción jurídica y declaró inaplicable el artí-culo 147 por violar los derechos antes indicados. De tal manera que a partir de ese momento se suspendió la prohi-bición de la reelección y se recuperó el derecho perdido. Es por esa razón que la candidatura del comandante Daniel Ortega fue constitucional y legal, y fue el pueblo el que decidió con pleno de-recho darle su apoyo mayoritario.

2 –Las elecciones se basaron en la Ley Electoral, en el Poder Electoral y la autoridad electoral vigente, incluido el CSE. Aunque la derecha cuestionó

CCC -

Jairo

Cajin

a

7

a los magistrados del Poder Electoral, a éstos se le prorrogó su periodo en el cargo porque la Asamblea Nacional no lo hizo en su momento.

El Presidente de la República como Jefe de Estado está en la obligación de velar por la estabilidad del país y la bienan-danza de las instituciones públicas; de ahí que emitió un Decreto para que, mientras la Asamblea Nacional decidía -en el marco de sus atribuciones- el nombramiento de los cargos de magis-trados, éstos continuaran en sus cargos. Con eso se evitó el boicot y la parálisis institucional que pretendían los parti-dos de derecha y se pudieron realizar

las elecciones en los tiempos que esta-blece la Constitución y la Ley.

3- La legitimidad se basa en la consti-tucionalidad y legalidad antes indicada, y también en la amplia y pluralista participación electoral del pueblo y los partidos políticos. Fueron cinco organi-zaciones políticas las que participaron: el PLC, el FSLN, el ALN, el APRE y el PLI; y por mucho que los descalifican con los epítetos de “magistrados ilega-les”, “de facto” y con “periodo vencido”, al participar dichas fuerzas políticas en la práctica también reconocían a la autoridad electoral y por tanto todo el proceso.

4- Los partidos políticos, además de su derecho a participar con sus can-didatos, tienen y tuvieron derecho a contar con miembros en las Juntas Receptoras de Votos y tener fiscales en todas las instancias electorales y en todos los momentos del proceso electoral, que fue y es la mejor ga-rantía de velar, observar y asegurar la limpieza de las elecciones. En las 12,960 JRV cada organización política participante tenía derecho a contar con fiscal propietario y suplente, y así se aseguró para todas con miles de fiscales acreditados participantes desde la apertura hasta el escrutinio de los votos.

De acuerdo a los datos del acompaña-miento electoral universitario, siem-pre hubo presencia de los fiscales de las 5 organizaciones participantes en todo el proceso, y al menos 3 de éstas estuvo en más del 92% de las JRV a través de sus fiscales.

La garantía de los fiscales, las seguridades del material electoral y el hecho que los opositores no hayan recurri-do con fundamentos presentar las supuestas anomalías, irregularidades o ilegalidades que sucedieron, indica que

todo es teatro, mentira y sólo pretenden empañar el limpio pro-ceso electoral desarrollado.

Aparte de lo que dicen en los medios de comunicación, no hay ningún fundamento para tal fraude: sólo impugna-ron 18 de las 12,960 Juntas

Receptoras de Votos (JVR), que representa únicamente el 0.13%, lo cual contradice -en la práctica- su discurso y evidencia su conducta de “malos perdedores”, como dice el pueblo

5- La amplia participación del pueblo de manera libre, sin ninguna restricción y con plenas garantías, fue otro factor de sólida legitimación del proceso electoral 2011.

6- Los resultados electorales expre-san completamente la real voluntad

del pueblo expresado en las urnas; se respetó el voto de 2,6 millones de nica-

ragüenses. Los resultados han sido confir-mados por el sistema de conteo rápido de los

organismos de acompañamiento electoral nacional e internacional, los que están en correspondencia o son muy semejantes a los que oficialmente ha publicado la au-toridad electoral; todo esto indica que el partido ganador es el FSLN, de ello no queda ninguna duda.

La esencia de la democracia es el respeto a la voluntad del pueblo, y el pueblo le ha dado el apoyo ampliamente mayo-ritario al FSLN y debe respetarse. Con esa decisión mayo-ritaria el pueblo ha votado por el Buen Gobierno y por una nueva y buena Asamblea que debe legislar en beneficio del mismo y por el Bien Común como se ha comprometido, ha cumplido y seguirá cumpliendo el FSLN.

A trabajar con más unidad y con más compromiso. El FSLN y Daniel le ha extendido la mano y le ha hecho un llamado a todos los sectores, incluidos los derrota-dos, a seguir trabajando por el desarrollo de Nicaragua, en la lucha frontal contra la pobreza y por construir una sociedad justa, siempre en un espíritu de unidad patriótica.

A seguir dignificando a Nicaragua con el ejemplo de Sandino y Carlos Fonseca, bajo cuya guía e inspiración el FSLN ha surgido y se ha desarrollado, ha dado las grandes batallas y las continúa dando por las mayorías populares, por una sociedad nueva, de plena realización humana.

__________________(*)Secretario Nacional. Comisión de Asuntos Jurídicos y Éticos del FSLN (CAJE-Nacional).

Se votó por el Buen Gobierno

Los resultados electorales ex-presan completamente la real voluntad del pueblo expresado en las urnas; se respetó el voto de 2,6 millones de nicaragüen-ses. Los resultados han sido confirmados por el sistema de conteo rápido de los organis-mos de acompañamiento elec-toral nacional e internacional

8

una revista consolidada1997 fue un año difícil para el Frente Sandinista. Como serían

los siguientes hasta 2003, con la consolidación del gobierno

del presidente Hugo Chávez Frías, que marcaría el inicio

impetuoso, hasta hoy imparable, de la nueva revolución

de América Latina y El Caribe. Una revolución orientada

al socialismo en los países más revolucionarios y volcando

hacia la izquierda los proyectos socialdemócratas del resto. Los otros, que hasta hoy

se conservan ligados a Washington con una política neoliberal, han perdido peso específico en la región.

Aldo Díaz Lacayo

E l Frente Sandinista de Liberación Nacional arrancó 1997 obligado a tragarse literalmente el burdo

pero gigantesco fraude de noviembre de 1996, aunque fraguado y dirigido por el Embajador norteamericano. Sólo él tenía libre acceso a los centros de cómputo, de todos los niveles, dispo-niendo a su antojo el manejo de urnas y boletas electorales. Sin ningún recato

ni pudor, más bien con desver-güenza. Peor aún, con abso-

luto desprecio a los votantes sandinistas. ¡Si las cañadas y los cauces hablaran!

Un fraude evidente para todos los partidos en con-tienda, especialmente para el PLC, beneficiario

directo. Pero también para la pléyade de observadores extranjeros. Siempre solicitados-impuestos por los gobiernos del Norte e igualmente siempre bienve-nidos y sobrecalificados por la derecha local. Mucho más en aquella ocasión de triunfo anticipado del Frente Sandinis-ta, de Daniel Ortega Saavedra.

Observadores calificados pero cíni-cos, en detrimento de su respetable hoja de vida. Baste recordar que el religioso y ponderado Jimmy Carter y el premiado y arrogante Oscar Arias, reconocieron el fraude pero le reco-mendaron a Daniel, tragárselo. Con la misma falta de pudor y de recato, con la misma desvergüenza, con el mismo desprecio con que actuó el represen-tante del imperio en Nicaragua, cuya actuación se explica porque venía de la mafia de la DEA.

En su XIV aniversario

9

No fue un cambio financiero para Visión Sandinista, pero sí un vuelco extraordinario en las condiciones subjetivas. La Revolución Bolivariana había encendido la mecha de la nueva revolución regional, integrándose plenamente a Cuba y abriéndose al resto de los países de América Latina y El Caribe.

Un cambio que fue asumido casi a nivel de reflejo condicionado por la dirigencia intermedia, los cuadros y las bases, y muy conscientemente por la dirigencia nacional, por Daniel Ortega Saavedra, quién inmediatamente acep-tó el llamado unitario de la Revolución Bolivariana e inició el proceso integra-

dor del Frente Sandinista a la revolu-ción regional.

Un proceso ascendente y acelerado, que daría una nueva base subjetiva a Daniel y al Frente, hasta regresar al gobierno en noviembre de 2006 y revalidarlo en noviembre de 2011 -inútilmente cuestionado por los inefables observadores internacionales, siempre cuidando los intereses de la derecha, del capitalismo.

El primer impacto de ese cambio fue precisamente sobre Visión Sandinista que dio también un gran salto en el enfoque informativo-ideológico y en la avidez de sus lectores, cada más

vez numerosos. No hubo cambio de dirección. No hacía falta. Simplemente la Directora y editora original asumió con acierto la nueva realidad y potenció al máximo la calidad de Visión Sandinista.

Hoy, catorce años después de su fundación, Visión Sandinista es una revista consolidada en términos de que cumple a cabalidad con su objetivo político-ideológico.

¡Salud y éxito para todos los años que siguen!

Managua, lunes 21 de noviembre de 2011

Una lucha cuesta arriba

Fue un trago tan amargo como irrecusable, producto del arrastre de la caída del socialismo real. Magnificado mediáticamente. El inicio efectivo de la guerra de cuar-ta generación. Subjetivamente entonces la izquierda estaba devaluada en el Mundo, aunque no el Frente Sandinista y Daniel Ortega Saavedra en Nicaragua. Un entorno regional y mundial no solamente adverso, sino

principalmente imbuido de la tesis del fin de la historia, del socialismo, de la revolución. Emborrachado de neolibera-lismo. ¿Cómo aceptar que ese mundo “decen-te” se rompiera nuevamente en Nicaragua? ¡Im-posible!

Todo el año 1997 estuvo marcado por ese sentimiento ambivalente de resignación- indignación. Pero también seguridad y confianza, porque a pesar del fraude ava-lado, quienes contaron los votos no pudieron llevar el fraude más allá del 40%, el entonces caudal electoral de Daniel y el Frente Sandinista.

Seguridad y confianza que permitió mantener lo fun-damental de las estructuras partidarias para reiniciar la lucha, pero de muy difícil manejo mediático. El Frente

Sandinista era deficitario en medios de comu-nicación, principal-mente en medios es-critos, que prevalecen en el ámbito político-ideológico. Por múltiples problemas, propios de la época post-socialismo real, Barricada había entrado en un proceso de cierre, que finalmente se dio en diciembre de 1997.

Frente a esta realidad comunicacional deficitaria, un mes antes del cierre de Barricada, nace VISIÓN SANDINISTA, la revista política de Nicaragua -en realidad la revista oficial del Frente Sandinista. Una lucha cuesta arriba. Con dificultades financieras y sobre todo en medio de la carga subjetiva negativa del fin de la historia, del socialismo, de la revolución, lograda mediáticamente e inmediatamente después de la caída del socialismo real, potenciada por el fraude electoral de los barrancos y las quebradas, de noviembre 1996.

En este ambiente de desventaja subjetiva y con el apoyo de algunos empresarios ligados al Frente Sandinista, se editó y distribuyó limitadamente Visón Sandinista has-ta el año 2003. Entonces, como ya se indicó, la Revolu-ción Bolivariana logró sentar sus reales. Había domina-do no sólo el golpe de Estado dirigido por Washington y tratado de implementar por la derecha local, sino también el paro petrolero. La Revolución Bolivariana era dueña, por fin, de los inmensos recursos petroleros hasta entonces enajenado.

Calidad potenciada al máximo

Frente a esta realidad comunicacional deficitaria, un mes antes del cierre de Barricada, nace VISIÓN SANDINISTA, la revista política de Nicaragua -en realidad la revista oficial del Frente Sandinista.

Ernesto Aburto M.

“Siempre quise hacer algo que valiera la pena dentro del FSLN, y catorce años después del primer impulso, yo creo que lo he logrado”, nos comentó a modo de confidencia la ex subcoman-

dante de contrainteligencia del antiguo MINT, militante política y periodista Mayra Reyes Sandoval, directora-fundadora de la revis-ta Visión Sandinista desde noviembre de 1997.

Aun cuando ya el comandante Daniel Ortega enfrentaba sin éxi-to su candidatura presidencial contra el controversial candidato liberal Arnoldo Alemán, los pasillos de la Secretaría del FSLN todavía lucían un tanto desolados en los meses finales de 1997, luego de que muchos de sus visitantes habituales se habían cam-biado de partido, o bien, se habían retirado a sus propios asuntos tras el traumático revés de 1990.

10

Mayra Reyes y la gesta de Visión Sandinista

A 14 años“Una lucha más dura fue mantener con vida a la criatura”

de “un parto muy difícil”

Un mes después moría Barricada

Fue durante aquellos días en que Mayra me invitó a respaldarla en el parto de su “tercera hija”, como siente ella a su revista, la cual logró publicar sus primeros números con solamente el apoyo material y espiritual del actual Presidente de la República, y con el acompañamiento de algunos periodistas y políticos amigos que creyeron en su sueño periodístico o, simplemente, como en el caso mío, creyeron en ella y querían ayudarla.

Silvio Mora, Freddy García, Manuel Espinoza Rivera, Rafael René Corea (de quien muy pocos saben de su actual paradero), Aldo Díaz Lacayo y el suscri-to, así como la administradora Mirna Figueroa, éramos algunos de los que, como silenciosos conspiradores, rodeábamos a Mayra en aquella oficina que puso a su disposición el Secretario General del partido, para planificar, ela-borar y editar los primeros experimentos periodísticos que se materializaron en las páginas de Visión Sandinista.

Personalmente, a lo largo de casi tres décadas de ejercicio, había visto na-cer y morir a muchas publicaciones impresas, y en las adversas situaciones económicas del momento, no tenía razones para creer que ésta fuera una excepción.

Reforzaba mi escepticismo el hecho de que un mes después del primer número de la revista, quebró estrepitosamente el proyecto de 17 años que se conoció como Diario Barricada, órgano oficial del FSLN.

Pero la tenacidad y el temple de Mayra Reyes, que al principio distribuía la re-vista ella misma en su propio carro, me han convencido de lo contrario al final de estos últimos catorce años. Visión Sandinista -que con este número ya suma 199 ediciones- había nacido para perdurar en el tiempo.

Por la oficina de la revista han pasado tecleando sus aportes inolvidables co-legas como Alfonso García, Xiomara Reyes, Oscar Robelo, Vilma Duarte,

Acompañando un sueño

Mayra Reyes Sandoval, directora de Visión Sandinista.

11

También el haber recopilado y documentado la historia del FSLN en el curso de los últimos 14 años desde el punto de vista de sus congresos, asambleas, elecciones nacionales, conflictos y contradicciones internas.

Igualmente el hecho de ser un punto de referencia para estudiantes, profesores e investigadores sociales e histó-ricos que vienen a documentarse en los archivos de la re-vista, los cuales están digitalizados, número por número, desde la fundación en 1977, en tanto que la página web de visión.(arroba) ibw.com.ni está disponible al público desde el año 2000.

Ahora, desde las alturas de la sostenibilidad económica actual, Mayra Reyes Sandoval estima que el nacimiento de Visión Sandinista fue un parto muy difícil, pero -aco-ta- “fue más difícil mantener con vida a la criatura, y eso lo conseguimos con el esfuerzo de todos”.

Anunciantes fieles Un documento de catorce años

Luis Alemán, y otros tantos a quienes la traidora memoria nuestra deja presos en el fondo del tintero. Fotógrafos tam-bién como Juan José Membreño, Jairo Cajina, César Pérez y

don Abraham Miranda, sin cuyos esfuerzos técnicos y crea-tivos, muchos de los 199 números hubieran sido visualmente aburridos.

Tampoco están olvidados en los anales de la revista los primeros anunciantes fieles, cuyos aportes económicos perduran hasta este día, como Arenas Motastepe, Produc-tos Delmor y Caruna, entre otros, y el esfuerzo de ellos es tanto más valioso si consideramos que la propia Directora-Fundadora reconoce que en general “no tuvimos el apoyo necesario de todo el empresariado sandinista, por lo cual en algunas épocas difíciles tuvimos que salir cada dos o tres meses”.

Aunque también –recuerda- “nos convertimos efímera-mente en una publicación semanal durante las elecciones de 2001, cuando el FSLN perdió ante el ingeniero Enrique Bolaños”.

Entre las realizaciones que se atribuyen a Visión Sandinista en sus 14 años de existencia están, en primer lugar, haber sido el único medio impreso del FSLN, sin haber sido necesariamente su órgano oficial.