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El presente más allá del pasado Acerca de Vestimenta ritual tradicional de la Santería cubana, de María Elena Molinet

Lázara Menéndez

* La Fundación Fernando Ortiz acaba de conferirle a este libro el premio Catauro Cubano (2008). ** Graduada de Historia del Arte. Doctora en Ciencias sobre Arte. Profesora de la Facultad de Artes y Letras de la Universidad de La Habana. Especializada en arte africano y estudios afrocaribeños. Sus investigaciones giran en torno a las artes plásticas y la religiosidad popular cubana de antecedente africano. [email protected] A partir de este momento aparecerá en el texto como CFN.

De acuerdo como se vista y se comporte el visitante, será invitado o no a participar en las tareas domésticas. Odu Ogbe Owanrin (De Souza, 2005:134) Por medio de las cosas corpóreas y tem-porales podemos comprender lo eterno y espiritual.San Agustín (citado por Margolin, 2002:15)

Cuando supe que el libro de María Elena —esa fue, para mí, su primera identidad— sería publicado por el Centro de Investiga-ción y Desarrollo de la Cultura Cubana Juan Marinello —en aquel momento no era Insti-tuto, y en su dirección estaba Pablo Pache-co— sentí una profunda alegría, pues estaba convencida de que ese era su espacio. En la obra de esta institución se ha expresado la voluntad de revelar la diversidad y el en-trecruzamiento de imágenes y memorias en las vidas cotidianas “como tensiones consti-tutivas de la cultura y la sociedad cubanas”, (Amador, 2003:18) con lo cual, la tradicional distancia entre una cultura sesgada por los ejes de lo alto y lo bajo, lo académico y lo no-académico, lo culto y lo popular, ha sido recolocada hacia una suerte de aleación de referencias culturales, de articulación de for-mas heterogéneas de existencia.

Aunque no era ocasional que aquel fuera el entorno pertinente para la publicación de un estudio de la “imagen tangible de cada santo dentro de su universo visual y su le-guaje simbólico” (Molinet, 2007:65) por el camino la idea podía extraviarse —vale re-cordar el popular proverbio “del dicho al he-cho hay mucho trecho”—; mas no, esta se

El presente más allá del pasadoAcerca de Vestimenta ritual tradicional de la Santería cubana,de María Elena Molinet* Lázara Menéndez**

materializó y el júbilo se expande y se multi-plica en cada presentación, en cada persona que se acerca y comenta el costado del libro que le parece más interesante o atractivo.

Vestimenta ritual tradicional de la Santería Cubana es un estudio que se ocupa de la imagen visual en una práctica religiosa, his-tóricamente subalterna. Después del triunfo de la Revolución se le concedió a la investi-gación y difusión del patrimonio cultural de origen africano una dimensión importante en el ámbito de la cultura popular tradicional, especialmente en el contexto de la cultura artística. La creación y el repertorio del Con-junto Folklórico Nacional1 y de Danza Nacio-nal de Cuba así como la fundación del Insti-tuto de Etnología y Folklore dan fe de ello. Uno de los encantos del libro, como pun-tadas que definen un corte, es la habilidad para remitir al lector al ambiente de creación, rigor y exigencia intelectual, que se manifes-tó en no pocas de las acciones emprendidas desde el Teatro Nacional; diferentes semina-rios y proyectos —uno de ellos, la formación del CFN— se desarrollaron al amparo de esta institución.

Complejo y difícil fue el proceso de crea-ción del CFN, este nos da idea de lo con-tradictoriamente paradójica que resultó esta época. Manuel Moreno Fraginals nos sitúa frente a los múltiples ejes de conflicto y ten-dencias que se desarrollaron y manifestaron alrededor de la constitución de esa entidad, y cómo reflejaban los reparos y rechazos existentes alrededor del acontecimiento re-ligioso. Grupos no religiosos argumentaron que esto iba en contra de la hegemonía de la

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política laica sostenida por el Estado; otros analizaron el asunto desde la perspectiva de una necesaria desacralización de aquellas formas consideradas como artísticas y que con ello se orientaría “el proceso de liquida-ción religiosa”. (Moreno Fraginals, 1985) Los grupos religiosos, por su parte, consideraron irrespetuosa y sacrílega la presentación en escena de danzas y cantos que hasta el mo-mento habían sido solamente expresión de lo sagrado. Argumenta Moreno Fraginals:

los elementos musicales/danzarios que se pretendían estudiar, revalorizar y difundir tenían un carácter litúrgico/religioso, de religiones vivas, de origen africano, prac-ticadas por un determinado sector de la población cubana. […] Como es lógico, presentaron una fuerte resistencia a la presencia de investigadores en sus cen-tros rituales y mas aun a la transformación de la música y las danzas sagradas en un espectáculo teatral profano. (1985)

El recuerdo nos remite a un hecho que quedó fijado en el documental Historia de un ballet (1961): la presencia del religioso —“del hombre de la calle”, “el de a pie”, decimos hoy— en el teatro para observar, como espectador, la dimensión cultural y ar-tística que otorgaban los creadores a lo que él realizaba como actor desde su práctica co-tidiana. En esa magistral propuesta de José Massip se muestra el proceso de creación de una no menos magistral producción danza-ria que fue Suite yoruba, de Ramiro Guerra. Y a través de él podemos percibir la rela-ción entre el “hecho folklórico” y el trabajo de investigación y creación que sustenta la “proyección folklórica”, para expresarnos en los términos del maestro Guerra. En todo ese germinal desarrollo está inmersa María Elena Molinet.

En Vestimenta ritual tradicional de la San-tería cubana, la fugaz evocación de los años sesenta —época complicada, contradicto-ria y percibida como dorada, si la referencia son los años cincuenta y los setenta— no es

nostálgica. María Elena fue una protagonista desde el lado de los creadores; contribuyó a la objetivación de imágenes para la escena, porque ella tiene una mirada aguda, un oído sensible y una inteligencia cultivada y recep-tiva que le permitió poner a disposición de los portadores y de todos una tradición que era instalada, por primera vez, en los circui-tos de legitimación del saber y el hacer inte-lectual considerado de alto vuelo.

El “todo mezclado” de Nicolás Guillén re-aparece en este libro de María Elena Molinet, dotado del especial encanto de una tradición no fosilizada. Cuando el humilde y paciente lucumí ha ido cediendo el espacio al sober-bio y sonoro yoruba, la autora suscribe el pri-mero porque “fue el más tradicional utilizado en Cuba” (2007:29). El lucumí vistió, cantó y tocó en los corazones de Nieves Fresneda, Lázaro Ross, Jesús Pérez, Merceditas Valdés, Facundo Rivero, Fernando Ortiz, Lydia Cabre-ra, Rómulo Lachatañeré, Argeliers León y tan-tos otros hombres y mujeres, recordados en las moyubas o perdidos en el espacio infini-to de la memoria, responsables, de alguna u otra forma, de la presencia de un patrimonio que se reconoce como “ingrediente sustan-cial del alma común de la Nación toda”; (Mo-nal, en Molinet, 2007:27) el vocablo lucumí arrastró consigo la última parte de un poema que pertenece al Odu de Ifá Babá Obara Meyi y dice: “al hombre que sabe y sabe que sabe, pero no hace alarde de saber: síguelo”. (De Souza, 2005)

Vincular lo doméstico y lo cotidiano con lo eterno y lo espiritual es tarea de titanes. El diálogo con la tradición oral desarrollado por “la diseñadora de vestuario”, (Molinet, 2007:27) la voluntad de reducir los espacios creados por la desinformación, en virtud de la carencia de investigaciones rigurosas en el espacio de la vestimenta ritual, y la apli-cación de los “métodos con los que se pue-de estudiar y reconocer distintas prendas vestimentarias, clasificarlas y aislarlas” (Mo-linet, 2007:32) le ha posibilitado reconstruir “la historia de las ropas y accesorios, con un mínimo de riesgo”. (Molinet, 2007:29)

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Ha desplegado sobre la mesa el lenguaje de las prendas y su relación con las tipologías, la tecnología, el tiempo y el espacio.

La sistematicidad y la sagacidad inves-tigativas de María Elena Molinet le han permitido indagar en la parafernalia de la Santería o Regla Ocha-Ifa. El estudio acer-ca de la “imagen” del cubano, constituida para esta autora por “el cuerpo humano con sus etnias y tipologías; la gestualidad y la vestimenta colocada como una ‘segun-da piel’”, (2007:11) le permitió asumir la propuesta teórica formulada por Argeliers León para la cultura popular de ascenden-cia ancestral y denominar vestimenta de lí-nea popular tradicional la que sería su ob-jeto de estudio.

Las sociedades recurren al cuerpo y a la transformación de la apariencia corporal mediante vestimentas, adornos, pinturas, tatuajes, escarificaciones, etc. como mane-ra de definir la identidad individual, social y étnica, y de comunicar mensajes sobre los contenidos y valores de la persona, de roles y de estatus; así, en el análisis del vestuario María Elena Molinet no pierde de vista las variaciones que se introducen en la indumentaria en virtud de la posición socioclasista del sujeto dominante o do-minado. La autora pone de manifiesto que la cosmología santera se expresa también en lo artificioso de un vestuario que es el resultado de variados procesos de cam-bio, o de transculturación, como dijera Fer-nando Ortiz y demuestra la Molinet a lo largo de su estudio. Indiscutiblemente la apropiación de tipologías y estructuras fo-ráneas fue una resultante del proceso de imposición cultural o deculturación a que fueron sometidos los esclavos y sus des-cendientes, una manera de sobreponerse a los nuevos patrones de poder que les eran impuestos, apropiándose de los elemen-tos a disposición de la cultura hegemóni-ca, como un modo de concretar el calado creativo de la vida diaria.

María Elena Molinet nos sitúa ante la insinuante y provocativa problemática nor-

ma-innovación, cuando después de un me-surado balance se inclina “a opinar que es-tas [se refiera a la vestimenta] empezaron a conformarse a mediados del siglo XX”. (2007:26) Tras este suave movimiento, la reflexión que acompaña a la lectura nos invita a preguntarnos: ¿en qué medida ese fue un vestuario que pudo ser considerado continuador de una tradición en las pos-trimerías del XIX y los inicios del XX? ¿La magnificencia era una señal de la persis-tencia en la memoria de los linajes africa-nos o coexistía con la necesidad de borrar el estigma de la pobreza y la sensación de privación, al apropiarse de modelos de engalanamiento utilizados por los sectores dominantes? ¿Qué ocurrió en el transcurso del siglo XX y qué aconteció en la década del sesenta, que nos hizo asumirlo como parte de una tradición?

El vestuario en la santería forma parte de una práctica religiosa que se orienta a la consecución de un mejor nivel de vida; ella es un ejercicio que busca el bienes-tar de sus practicantes en el mundo real y concreto en el que viven. La vestimenta deviene una suerte de medio de comuni-cación y de acción; los seres míticos se convierten en receptáculo de poder. María Elena Molinet nos sugiere que la relación entre la “imagen intangible” del oricha, se-gún los mitos, y los elementos “vestimen-tarios tangibles”, que intentan reproducir la imagen del santo, abriera el espacio a la opulencia del cotidiano y a las hibrida-ciones que en él se producen en el ámbito de las equiparaciones religiosas.

Con esta conjetura el lector puede hacer una lectura dinámica, fluida, por un tex-to donde no se concentran fórmulas para construir trajes tradicionales; María Elena Molinet devela articulaciones entre relatos o patakines y estructura del vestuario, y ello opera como una invitación a continuar la indagación entre los objetos y el univer-so de significación que se abre en la cos-mología en cuestión.

Gracias a María Elena por entregarnos

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El presente más allá del pasado Acerca de Vestimenta ritual tradicional de la Santería cubana, de María Elena Molinet

Lázara Menéndez

un documento indispensable para el cono-cimiento de una práctica cultural que en-cuentra en su vestuario una manera de ex-presar sus identidades.

¡Aché!

Bibliografía

- Amador, José 2003 Prólogo a Historia y memoria: sociedad, cultura y vida cotidiana en Cuba (1878-1917) (La Habana: CIDCC Juan Marinello / Universidad de Michigan).

- De Souza, Adrián 2005 Los orichas en África. Una aproximación a nuestra identidad (La Habana: Editorial de Ciencias Sociales).

- Margolin, Víctor 2002 Las políticas de lo artificial. Ensayos y Estudios sobre Diseño (Chicago: Editorial De-signio).

- Molinet, María Elena 2007 Vestimenta ritual tradicional de la Santería cubana (La Habana: ICIC Juan Ma-rinello).

- Moreno Fraginals, Manuel 1985 “Conjunto folklórico Nacional de Cuba. Análisis sociocultural de una ins-titución artística”, ponencia presentada en la Primera Conferencia Científica del Instituto Superior de Arte, La Habana.