notas viejas galicianas por don pablo perez costanti

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VIII Notas viejas galicianas por don Pablo Pérez Cos tant i, archivero del Excino. Ayuntamiento de Santiago; de las Reales Academias Gallega, de la Historia y de Bellas Artes de San Fernando. ÜNQUE amantes en grado sumo de su patria chica, no han atendido los gallegos, tanto como los de otras partes de nuestro territorio, al estudio de su propia evolución regional a través de los siglos. "Todos los Reynos y ciudades de España —escribía Pellicer al Concejo compostelano hacia 1658— se hallan hoy con His- torias impresas; sólo el de V. S. sin ella." Y todavía en 1715 el presbítero don Antonio Paredes Ponte y Andrade se ofrecía a La Coruña, estimulándola para hacer la exposición de las glo- rías de Galicia en lo pasado : "¿ Hemos de ser nosotros menos que las otras provincias del Orbe, teniendo por ventura que hablar si no más, tanto como ellas?... Alentémonos a hacer lo que todos, porque no se diga que somos como ninguno ; desterremos aquella vulgaridad castellana que dice no somos gente; borre- mos ya con muestra pluma aquella indecorosa nota de bárbaros que el erudito Mariana nos impuso." Semejantes excitaciones y buenos propósitos iban quedan- do sin resultante útil. Porque aunque no faltó quien dejase correr largo la pluma, los juicios que merecieron las sucesivas publicaciones al padre Sarmiento fueran tales, que en sus Caste- llanos de Orense manifiesta âel padre Gándara y de algunos otros que "toda su ciencia consiste en reimprimir errores añejos y patra-

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  • V I I I Notas viejas galicianas

    por don Pablo Prez Cos tant i, archivero del Excino. Ayuntamiento de Santiago; de las Reales Academias Gallega, de la Historia y de Bellas

    Artes de San Fernando.

    NQUE amantes en grado sumo de su patria chica, no han atendido los gallegos, tanto como los de otras partes de nuestro territorio, al estudio de su propia

    evolucin regional a travs de los siglos. "Todos los Reynos y ciudades de Espaa escriba Pellicer

    al Concejo compostelano hacia 1658 se hallan hoy con His-torias impresas; slo el de V. S. sin ella." Y todava en 1715 el presbtero don Antonio Paredes Ponte y Andrade se ofreca a La Corua, estimulndola para hacer la exposicin de las glo-ras de Galicia en lo pasado : " Hemos de ser nosotros menos que las otras provincias del Orbe, teniendo por ventura que hablar si no ms, tanto como ellas?... Alentmonos a hacer lo que todos, porque no se diga que somos como ninguno ; desterremos aquella vulgaridad castellana que dice no somos gente; borre-mos ya con muestra pluma aquella indecorosa nota de brbaros que el erudito Mariana nos impuso."

    Semejantes excitaciones y buenos propsitos iban quedan-do sin resultante til. Porque aunque no falt quien dejase correr largo la pluma, los juicios que merecieron las sucesivas publicaciones al padre Sarmiento fueran tales, que en sus Caste-llanos de Orense manifiesta el padre Gndara y de algunos otros que "toda su ciencia consiste en reimprimir errores aejos y patra-

  • NOTAS V I E J A S GALICIANAS 43

    as modernas de los falsos Chronicones", asegurando que los Anales de don Francisco Manuel de la Huerta parecan escri-tos desde la Patagonia.

    An hay ms. El cultsimo padre Feijo, deseoso de servir en algo a la tierra que le vio nacer, quiso "vindicarla" de los injuriosos conceptos corrientes por el mundo, medante un Dis-curso de los de su Theatro Crtico,

    Para redactar las pocas pginas que se propona hubo de confesarse ayuno de las noticias ms imprescindibles, por lo que escribi cartas a las principales poblaciones gallegas pidiendo datos. Y aunque los Municipios a los que acudiera nombraron personas competentes, y aunque las aconsejasen pusieran en ello "las ms vivas dilixencias", todo fu vano, y ni consta que su suministraran al ilustre benedictino los antecedentes que solicitaba. Por cierto que es asombroso que una de las cosas en que ms haba insistido era en que se le diesen detalles referen-tes al descubrimiento "de un estrecho ms all del de Maga-llanes, que en algunos Mapas extranjeros se apunta haber sido hecho por los hermanos Nogales de Pontevedra i en ningn au-tor he hallado' ' ; evidenciando ignoraba cosa de tanto inters como el celebrrimo viaje del que haba minuciosa relacin realizado por los dos hermanos Nodal. (Vase "Relacin del viaje que por orden de Su Mau y acuerdo del Real Consejo de In-dias hisieron los Capitanes Bartolom Garca de Nodal, y G on-cejo de Nodal hermanos, naturales de Ponte Vedra, ai descu-brimiento del Estrecho nuebo de S. Vicente y reconosim.0 del de Magallanes.A Don Fernando Castillo, Cauallero del abito de Santiago. Presidente en el mismo Consejo. Con Privilegio. En Madrid. Por Fernando Correa de Montenegro. Ao 1621'\)

    Pero desde la mitad prximamente del pasado siglo x i x los historiadores de Galicia han ganado con felicsimo modo el tiem-po perdido. Y tras les trabajes de Vedia, de Murgua, de Villa-arml, y sobre todo del infatigable Lpez Ferrero, insigne cronista de la Metropolitana de Compostela, avanza una benemrita fa-lange de investigadores que, preparados con las ms modernas armas de la actual Historiografa buscan, transcriben y comen-tan antiguos documentos, donaciones, escrituras o actas notara-es, a la vez que bucean en lo tradicional, se apoyan en la Antro-

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    pologa, recogen leyendas, consejas y proverbios y completan, con lo que dicen las piedras de los monumentos en sus inscripcio-nes o en su elocuencia muda, lo que no se halla ni en pergaminos ni en papeles.Repasando los libros que van apareciendo, sema-narios y diarios locales, y sobre todo Boletines como los de l.as Comisiones de Monumentos o el de la Real Academia Gallega, sorprende la cantidad y calidad de lo realizado por los especia-listas.

    Entre estos ltimos merece un puesto de honor el archivero del excelentsimo Ayuntamiento de Santiago don Pahio Prez Costanti, quien con su firma o bajo el seudnimo El Bachiller Peres, anima y sostiene la curiosidad pblica, aficionndola ca-da vez ms, gracias a una ya larga serie de artculos de peridi-co o con estudios de mayor enjundia y extensin, en los que,, con un estilo muy agradable y forma de extraordinaria ameni-dad, vierte la copiosa vena de sus fecundas y penosas investigacio-nes, efectuadas, ao tras ao, en Catedrales, en Iglesias, en los protocolos notariales, en ios documentos del Estado, de las Di-putaciones o de los Municipios ; en fcs de los Establecimientos de Enseanza, en todo aquel vasto y pintoresco territorio que ha escudriado hasta en sus ms recnditos rincones.

    Lo de mayor inters de lo hallado por el seor Prez Costan-ti, recgelo ahora en un precioso libro en dos volmenes, que ha publicado en reciente fecha con el ttulo ele Acotas viejas galicianas y que es el objeto del presente informe.

    A juzgar por tal ttulo, las pretensiones del autor no son mu-chas; pero tras ese epgrafe modesto se esconde una obra de una trascendencia que, aun sin necesidad de muy atenta lectura, puede apreciarse ya, a primera vista, como extraordinaria. Toda a vida de la regin gallega durante los siglos xvi , x v u y x v n i tan ig-norados en lo ntimo surge con las tintas de la realidad, pict-rica d

  • NOTAS VIEJAS GALICIANAS 4 3

    cuos, pues las armas se pintan de modos tan diferentes, que Po-rreo las pone con seis estrellas, Hernando de Ojea (en el ma-pa del Atlas Orteliano) adrnalas con las palabras Hoc miste-rim firmiter profitemur, Vaamonde Lores las compendia en la hostia y el cliz, Pallares y Gayoso en la custodia dorada, 3^ en nada se parecen las hermosamente labradas sobre uno de los bal-cones del Hospicio de Madrid, con sus mltiples cruces, que pue-blan el campo del escudo y las que figuran en el famoso grabado del Triunfo de Maximiliano, donde campea nicamente el copn, emblema de Lugo, vieja y celebrada capital de nuestras comar-cas nord-occidentales, segn reconoca Alfonso II en un docu-mento por el que trata de sublimar a la ciudad del Mio., en modo anlogo a como se vea la ovetense... : "placuit ani-mo meo, ut Solium Regni Ovetum firma rem., et ibi Ecclesiam construerem in honorem Sancti Salvatoris, ad ipsitts similitu-dinem, Ecclesiae Sanctae Mariae Lucensis civitatis ; et placuit mihi ut Principatum totius Galleciae ipsa Luco obstineret cha-tas.' ' (Espaa Sagrada, X. XL, apndice XV.)Pero en este punto de su propia capitalidad tampoco andan ni anduvieron concordes los autores que trataron de aquellos territorios.

    El seor Prez Costanti nos da noticias del mayor inters sobre el nmero de provincias gallegas (cinco en 15.32, siete en los promedios del siglo decimosexto), sobre el rgimen ele las mismas, sobre el voto en Cortes con que a todas ellas represen-taba Zamora, sobre Ja. Junta del Reino, constitucin de la mis-na, tratamiento y honores que la correspondan y gastos que ejecutaba, hablando igualmente de la Audiencia, de los Conce-jos, de los Alcaldes, de los Procuradores generales y del servi-cio militar y naval.

    En lo tocante a la evolucin econmica, son realmente ment-simes les estudios que se titulan ' 'La industria pesquera en Ga-licia", " U n Real Despacho sobre el consumo de los vinos' ' , "E l ganado de Galicia para Andaluca en 1571",

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    de la reforma de los gremios mayores de Santiago, efectuada en 1702 y 1783, oel aprendizaje ae oLcios y de tas cartas de examen para poder ejercerles.

    Sobre el servicio domstico en pleno siglo xv i se transcri-ben o extractan curiossimos contratos, y otros no menos nota-bles de asistencia quirrgica, hablndose por extenso de las vi-sitas de boticas y del estado de ios mdicos, y de la medicina en ios aos de Carlos V y de los Felipes.

    En lo que atae al desenvolvimiento intelectual, no solamen-te se toca lo relativo a la ciencia de Hipcrates, si que tambin a la Ingeniera ("Los ingenieros Lemaur") , a impresores y li-breros, a iluminadores y script-ores, a instruccin pblica, al padre Sarmiento y a los cronistas de Galicia, demostrndonos que el autor de El Cisne occidental y de Armas i triunfos em-pez su vida literaria dando a la prensa un Eptome historial;, del que, hasta ahora, 110 sabemos si lleg a publicarse por com-pleto.

    A la moral, a las fiestas pblicas, al Teatro, a la vida escolar tan llena de animacin, a las peregrinaciones, a todo atiende el archivero' santiagus en los dos tomos de su obra, que en junto excede de las 800 pginas, con un centenar largo de estudios sobre los ms diversos temas.

    De entre ellos llaman vivamente la atencin los referentes a Bellas Artes, y de modo muy especial el relativo a los "Brosla-dores de los siglos xvi y x v u " , que por la riqueza de datos y por la abundante investigacin directa es espuela al deseo de que su autor concluya pronto el Diccionario biogrfico de los artistas de todos los rdenes que en Galicia florecieran entre los si-glos xv y xvi i i . .'

    Estmulo a tal labor debe ser para el seor Prez Costanti el acierto con que ha sabido recoger sus Notas viejas-galicianas, libro que considera de mrito relevante esta Academia, y as lo hace constar ,a los fines para los que se ha pedido el presente in-forme.

    ABELARDO MERINO.

    Aprobado por la Academia en sesin de 11 de febrero 1927.