VELAVERDEEscrito por Carlos Bruce / Lunes, 03 de agosto de 2015No hay Presidente? No esperbamos en la delicada coyuntura actual que atraviesa el pas escuchar un mensaje presidencial tan pobre y anodino, que slo servir para desmoralizar ms a una poblacin que -en medio de la desesperacin y frustracin- esperaba a un lder que le devuelva siquiera algo de esperanza. Lamentablemente, con el peor de sus mensajes vertidos hasta hoy, Humala nos ha convencido de su total falta de visin de estadista y liderazgo que lo han caracterizado en todos estos aos.En momentos en que haca falta un lder que explicase con realismo la situacin actual del pas, lo que se ha hecho y lo mucho que falta por hacer, reconociendo los errores, fijando objetivos claros y las metas a conseguir con un plan definido e impulsado con accin, el mandatario prefiri renunciar a esa suprema prerrogativa. Ignorando la realidad y enalteciendo sobremanera su legado social Humala ha pretendido hacernos creer que hemos avanzado mucho y que debiramos estar orgullosos como l. Sin una piza de hidalgua para reconocer sus gruesos errores cometidos a lo largo de estos cuatro aos -que han llevado a que el pas est aletargado y con riesgo de ir a la deriva- Humala se ha negado a ver el panorama sombro que se le presenta al pas, con riesgo de agravarse, si no se aplican las medidas que hacen falta. As, la desaceleracin persistente, la exasperante inseguridad creciente y la rampante corrupcin que lo rodea, en medio de su aislamiento poltico, no le han merecido la menor preocupacin.Al no haber anunciado ninguna medida importante, el mandatario nos est diciendo que ya ha hecho lo suficiente para salir del bache en que nos encontramos. Cree seguramente que con decretos se resolvern los problemas del pas. Lamentablemente, no es as como el presidente lograr revertir la prdida de su credibilidad y liderazgo ante los ojos de la poblacin y de los agentes econmicos.No hay como hacerle entender al presidente que no es con ms leyes que har encender los motores del crecimiento, ni los criminales dejarn de actuar, o los corruptos seguirn haciendo de las suyas hasta en sus cercanas. Tampoco entender que no son los decretos los que garantizarn la estabilidad poltica del pas.Por ltimo, con la negativa del presidente a dirigirse amable y conciliadoramente a las fuerzas de oposicin -que hoy controlan el Congreso luego de infligirle una aleccionadora derrota- se aleja la posibilidad de alguna reforma importante en lo que queda de su mandato, adems de augurar la crispacin de la confrontacin poltica.As las cosas, nada bueno queda por esperar de este gobierno sin liderazgo, sino la persistencia en los errores, adems del regreso de la demagogia, el populismo y el clientelismo descarado con pretensiones electorales, con lo cual, la situacin slo podr empeorar.Humala ha decepcionado a una poblacin desesperada por proteger su integridad fsica y que reclamaba medidas urgentes ante un Estado que parece no funcionar. Gente frustrada, adems, al ver a un mandatario sin liderazgo, aislado, dbil y ensombrecido por la corrupcin que ha llegado a la Casa de Gobierno.Sin pretenderlo, en su mensaje para el olvido el Jefe del Estado ha descrito casi a la perfeccin lo que ha sido su gobierno hasta ahora: sin visin, sin objetivos, sin planes, sin desafos, sin lder con agallas y energa que sea capaz de mover a todo un pas.