Marco y estructura para la gestión de riesgos

La administración de riesgos requiere una adecuada estructura organizacional, que cuente con las áreas y comités necesarios para desarrollar dichas funciones y que evite posibles conflictos de interés mediante una adecuada segregación de funciones. El Directorio del Banco de Corrientes, es el responsable de que nuestra entidad cuente con un marco eficaz, viable y consistente para la administración de los riesgos asumidos, y de la forma en que se gestionan los mismos, mediante la determinación y definición de las políticas generales, estructura y marco de gestión. Por intermedio del Comité de Riesgos, define y realiza el seguimiento del apetito de riesgo de la entidad y de su tolerancia al riesgo. El Directorio y la Alta Gerencia comprenden y evalúan permanentemente la naturaleza y el nivel de riesgo asumido por el Banco y la manera en que ese nivel de riesgo se relaciona con el nivel de capital. La Alta Gerencia es responsable de la consecución y mantenimiento del perfil de riesgos definido así como de la gestión diaria de los riesgos, debiendo asegurar que las políticas, prácticas y procedimientos de gestión de riesgos son apropiados según el perfil de riesgo del Banco y de su plan de negocios y de su efectiva implementación. Se entiende como Alta Gerencia, la Gerencia General y los gerentes que dependen de ella. En particular para la gestión integral de los riesgos del Banco, la identificación, evaluación y seguimiento del control y mitigación de los riesgos es responsabilidad de la Gerencia de Riesgos. En lo que se refiere a cada riesgo en particular se describen otras áreas que se encuentran involucradas o que originan el riesgo y su interrelación. Para el Banco de Corrientes, la gestión de riesgos es responsabilidad del Directorio, Comité de Riesgos, la Alta Gerencia, Gerencia de Riesgos y de los responsables de los procesos del Banco. El Banco cuenta con divisiones específicas responsables por el monitoreo y control de los riesgos. Estas áreas son independientes de las unidades de negocios que exponen al Banco a los riesgos y reportan directamente a la Gerencia de Riesgos y, por medio de ella al Comité de Riesgos y Directorio. Principios Generales Estrategia El Banco tiene como propósito alinearse bajo un modelo integral de Gestión de Riesgos tendiente a optimizar la rentabilidad mediante la constante revisión de los diversos riesgos que hacen a su negocio y operatoria. Estos riesgos deben delimitarse y cuantificarse dentro del marco del apetito de riesgo definido y aprobado por Directorio a través del Comité de Riesgos. Para ello el Banco define a través de sus procesos de riesgo, las mediciones objetivas que permitan gestionar activamente los riesgos. La Gerencia de Riesgos es la encargada de proponer las metas por tipo de riesgo al Comité de Riesgos, éste debe aprobar las mismas y elevarlas a consideración del Directorio. El Comité de Riesgos eleva a consideración del Directorio los resultados obtenidos y los desvíos a las metas propuestas. Asimismo, el Directorio determina si el nivel de capital del Banco es adecuado para los riesgos asumidos. La definición de metas alimenta y condiciona el ejercicio presupuestario en el que se analizan y aprueban de forma integrada los principales parámetros estratégicos del Banco como son sus resultados, capital, exposiciones al riesgo en general y por tipo de riesgo. Apetito al riesgo El apetito de riesgo se define como el nivel y tipo de riesgos que el Banco considera razonable asumir en la ejecución de su estrategia de negocio, de modo que pueda mantener su actividad frente a la ocurrencia de eventos inesperados que pudiesen tener un impacto negativo en su nivel de capital, en sus niveles de rentabilidad y/o en el valor del Banco. Contiene aspectos tanto cuantitativos como cualitativos y está directamente vinculado a la estrategia global del Banco, incluyendo la evaluación de oportunidades de crecimiento en negocios y mercados claves, la capacidad de financiación y el capital requerido.

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Objetivos Cualitativos Perfil general de riesgo medio-bajo basado en un modelo de negocio diversificado, centrado en:

• Política estable y recurrente de generación de resultados, sobre una fuerte base de capital y liquidez y una estrategia de diversificación efectiva.

• Una función de riesgos independiente y con una intensa participación de la alta dirección.

• Foco en el modelo de negocio en aquellos productos en los que el Banco se considera suficientemente conocedor y con capacidad de gestión (sistemas, procesos y recursos).

• La confianza de los clientes, directores, empleados garantizando el desarrollo de su actividad dentro de su compromiso social y reputacional, de acuerdo con los objetivos estratégicos del Banco.

• Disponibilidad adecuada y suficiente de recursos que permitan garantizar el mantenimiento de un perfil de riesgos compatible con el apetito de riesgo establecido.

• Política de remuneración que contenga incentivos adecuados para asegurar que los intereses individuales de los empleados y directivos estén alineados con el apetito de riesgo y sea consistente con la evolución de los resultados a largo plazo.

Objetivos cuantitativos El Banco define métricas globales y objetivos cuantitativos específicos por tipo de riesgo que se exponen en los apartados correspondientes. Los ejercicios de planificación, modelos de cuantificación y pruebas de estrés, complementan el marco de referencia del apetito de riesgo. Implementación Para el cumplimiento e implementación de las políticas y objetivos generales, El Directorio y la Alta Gerencia, han dispuesto que la Gerencia de Riesgos se encuentre integrada por las dependencias de Riesgo de Crédito, Riesgos Financieros y Riesgos Operacional, contando con la aprobación de las estrategias y políticas para cada una de ellas, actuando en forma independiente de las unidades de negocios que exponen al Banco a los riesgos. Los aspectos más significativos de las mismas, se mencionan a continuación: a) RIESGO DE CREDITO Definición

Se entiende como riesgo de crédito a la probabilidad de sufrir pérdidas por el incumplimiento que un deudor o contraparte hace de sus obligaciones contractuales. Esta probabilidad está dada como consecuencia de incertidumbres acerca de factores y variables que pueden afectar a los clientes en el futuro, tornando sus ingresos más volátiles de lo esperado. Las pérdidas por riesgo de crédito, se originan por el incumplimiento del deudor o contraparte de sus obligaciones y su magnitud depende, básicamente de dos factores: el monto de la exposición al momento del incumplimiento y los recupero obtenidos, constituidos ya sea por los pagos efectuados por el deudor, o por la ejecución de los mitigadores de riesgo que respalden la operación crediticia, limitando de esta manera la severidad de las pérdidas. El esquema de otorgamiento y análisis crediticio del Banco, se aplica en forma centralizada y se basa en el concepto de “oposición de intereses”, que se concreta a partir de la división entre las funciones de gestión del riesgo, crediticias y comerciales. Concepto de Gestión del Riesgo de Crédito La gestión del riesgo de crédito es el proceso de identificación, evaluación, seguimiento, control y mitigación que involucra diversos procesos, entre ellos:

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• el otorgamiento de las financiaciones,

• su administración y seguimiento posterior,

• y en caso de incumplimiento, su recupero.

Esta se realiza tanto a nivel total de financiaciones en las diversas carteras, como a nivel individual. Evaluación y seguimiento de las financiaciones La evaluación de los deudores y de las financiaciones debe realizarse de manera individual al momento de su originación, mientras que su seguimiento posterior se realiza en forma individual o por líneas de crédito o segmentos, dependiendo del tamaño de la exposición y del tipo de deudor. Ello con el objetivo de maximizar la rentabilidad ajustada por riesgo sin descuidar la solidez financiera de la entidad, incluso en situaciones de extremo estrés en el mercado. A esos efectos, la exposición al riesgo debe mantenerse dentro de límites aceptables y estar adecuadamente cubierta con previsiones contables y capital, según corresponda. La evaluación puede ser realizada cualitativa y cuantitativamente. Mediante éste proceso pueden reducirse las incertidumbres acerca del futuro comportamiento de los sujetos de crédito, dado que el mismo permite conocer con mayor profundidad al cliente, identificar los factores endógenos y exógenos que afectan al desarrollo de sus negocios, y en consecuencia sus necesidades financieras. Política El Banco ha definido políticas generales para la administración del riesgo de crédito, aplicables para todas las operaciones crediticias independientemente de la segmentación por tipo de cartera. Estas políticas son una guía para identificar, evaluar, seguir, controlar y mitigar el riesgo de crédito relacionado con las operaciones y constituyen el eje principal sobre el cual está soportada la Gestión del Riesgo de Crédito. Dichas políticas refieren a: • El crédito otorgado por el Banco debe estar orientado a financiar la inversión, la producción,

comercialización y consumo de los bienes y servicios requeridos tanto por la demanda interna como por la exportación.

• La cartera del Banco debe propender a la diversificación por sectores económicos, regiones y atomización del riesgo entre los clientes o grupos económicos, a fin de evitar concentraciones en el riesgo crediticio.

• Fomentar los negocios con empresas, bancos, individuos y entidades gubernamentales, manteniendo excelencia en la prestación de los servicios y asumiendo un bajo nivel de riesgo.

• Afirmar el objetivo estratégico de liderazgo dentro de la zona de influencia a través del cumplimiento de las metas de participación de mercado establecidas por la Dirección.

• Crear alternativas de financiamiento a la clientela dentro de estándares de calidad de cartera.

• Establecer manuales y procedimientos orientados a la evaluación de los prestatarios, a la concesión y liquidación de facilidades crediticias, a la administración de la cartera y al seguimiento y recupero de los préstamos en mora, manteniendo estándares adecuados para el otorgamiento de créditos.

• Seguir y controlar el riesgo de crédito.

• Identificar y administrar los créditos con problemas.

• Establecer criterios para la fijación de precios de los productos crediticios.

• Cumplir con las disposiciones establecidas por el Banco Central de la República Argentina, relacionadas con la operatoria de crédito.

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• Informar al Directorio acerca de la evolución y perspectivas de los distintos sectores económicos, a fin que dicho órgano pueda determinar los sectores objetivo, no objetivo y el grado de concentración de riesgo en los mismos con que debe operar el Banco.

Las políticas particulares y sus procesos asociados se agrupan en función a la definición del Proceso de Gestión del Crédito: Otorgamiento, Administración y Recupero. Esto tiene como objetivo lograr una mejor identificación de los lineamientos a cumplir, con el entorno de la etapa del proceso donde éstos estén incluidos.

Estrategia El objetivo de la estrategia de riesgo de crédito es asignar las pautas que guían el otorgamiento, administración y seguimiento de créditos del Banco. Abarca la definición del perfil de clientes al cual el Banco quiere otorgar créditos, la identificación del mercado objetivo, los niveles de calidad y rentabilidad esperada, y las características generales que el Banco quiere alcanzar en su cartera de crédito. El Banco aborda la estrategia través del establecimiento de metas, las cuales se entienden como un proceso dinámico que determina el apetito al riesgo del Banco. La fijación de las metas depende de las previsiones de negocio y de los riesgos inherentes que se prevean incurrir. Por ello, y a efectos de mantenerlas actualizadas, las metas se establecen anualmente y son sometidas a la aprobación del Directorio a través del Plan General de Negocios. El Banco realiza el seguimiento de los resultados obtenidos en forma regular a fin de evaluar la estrategia y realizar ajustes en caso de ser necesario. El Banco define, por medio de políticas y procedimientos de crédito, los aspectos detallados para llevar a cabo la estrategia de riesgo de crédito, entre ellos los criterios del Banco para otorgar crédito (incluyendo los términos y condiciones), atribuciones y facultades crediticias, tipos de productos y la forma en que organiza su estructura, entre otros aspectos. El Banco tiene en consideración en la formulación de su estrategia para la gestión de Riesgo de Crédito, su estructura organizacional, su rol de agente financiero, su orientación en la atención a todos los sectores sociales que conforman el territorio Provincial y a sus distintas necesidades. Objetivos específicos para la gestión El Banco define objetivos cualitativos y cuantitativos para la gestión del riesgo de crédito. La Gerencia de Riesgos evalúa el cumplimiento de la estrategia, reportando sobre su desempeño a la Alta Gerencia y Directorio en forma periódica. Objetivos Cualitativos El Banco ha definido como objetivos estratégicos cualitativos, en temas crediticios, los siguientes:

• El desarrollo y fidelización del mercado objetivo, basados en su perfil agente financiero provincial.

• Minimizar el riesgo de crédito mediante la atención de clientes de cartera de consumo principalmente relacionados con convenios de “acreditación de haberes o jubilaciones” y con una oferta de productos y servicios destinados al mercado específico, priorizando y contribuyendo al desarrollo de la provincia y sus actores.

• Financiar actividades para el desarrollo productivo de la región. Desarrollar nuevos productos, acordes a las necesidades de cada segmento objetivo y a los ciclos de la provincia.

• Posibilidad de crecimiento en otras provincias dentro del área de influencia, y en su seguimiento y control integrado con definición de Gestión completa del ciclo de riesgo de crédito con un modelo basado en el establecimiento de metas, estructura de límites y planes de gestión responsabilidades

• Utilización de métodos de calificación y clasificación.

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• Integración de la función de riesgos en toda admisión de riesgos de crédito, evitando la toma de decisiones discrecionales a nivel personal, en combinación con una estructura estricta de delegación de facultades.

Objetivos Cuantitativos El Banco ha definido objetivos cuantitativos y realiza su seguimiento a través de indicadores. A continuación se exponen las principales dimensiones de análisis a utilizar:

• Monto de la asistencia requerida

• Distribución de cartera por segmento

• Ratios de Calidad

• Ratios de Cobertura

• Nivel de previsionamiento por segmento

• Cartera por nivel de riesgo

• Análisis sectorial

• Concentración

• Excepciones crediticias

• Etc.

Límites totales por cartera – Concentración La Gerencia de Riesgos debe prestar particular atención a la diversificación de la cartera crediticia, en sus distintas modalidades de financiación, entre el mayor número posible de personas o empresas y entre las diferentes actividades económicas, de manera de evitar la concentración del riesgo crediticio por operaciones con un conjunto reducido de personas o empresas o que se refieran a un determinado sector que puedan comprometer significativamente el patrimonio del Banco. Operaciones con vinculados Cuando el Banco otorga asistencia crediticia a personas físicas y jurídicas vinculadas y al personal está sujeta al cumplimiento de la normativa vigente del BCRA y otra regulación que resulte aplicable. Esta asistencia debe ser autorizada de manera excepcional y sujeta a límites estrictos. La identificación de clientes vinculados, su seguimiento y potenciales indicadores de vinculación deben ser seguidos por el Directorio y contar con informes de la auditoría interna. Créditos trasfronterizos – Riesgo País Se entiende por Riesgo País, al riesgo de sufrir pérdidas generadas en inversiones y créditos a individuos, sociedades y gobiernos por la incidencia de acontecimientos de orden económico, político y social ocurridos en un país extranjero. Al respecto, cabe destacar que el Banco debido al tipo de negocio, mercado objetivo y estrategia no mantiene exposiciones crediticias con residentes en el exterior. Clasificación y previsionamiento El Banco al 31-12-2014 indica en su Manual de Clasificación y Previsionamiento las pautas y procesos seguidos en materia de clasificación de la cartera crediticia y previsión por riesgo de incobrabilidad y refleja los procedimientos implementados a tal efecto, conforme con lo establecido en la Comunicación “A” 2729 del B.C.R.A. y normas modificatorias y complementarias. La situación crediticia del Banco y su grado de exposición, al cierre del ejercicio 2014, se expone en los cuadros cuantitativos, correspondientes a este Régimen de Transparencia.

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b) RIESGOS FINANCIEROS RIESGO DE LIQUIDEZ

Definición de riesgo de liquidez

Genéricamente se define a la liquidez como la capacidad del Banco de fondear incrementos de los activos y cumplir con sus obligaciones a medida que éstas se hacen exigibles, sin incurrir en pérdidas significativas. En este sentido, se entiende por riesgo de liquidez principalmente al riesgo de liquidez de fondeo, definido como la probabilidad que el Banco no pueda cumplir de manera eficiente con los flujos de fondos esperados e inesperados, corrientes y futuros, y con las garantías, sin afectar para ello sus operaciones diarias o su condición financiera. Asimismo, se entiende por riesgo de liquidez de mercado a la imposibilidad de poder compensar o deshacer una posición a precio de mercado; debido a que ésta no cuenta con suficiente mercado secundario, o bien por perturbaciones en el mismo. Política

El Banco cuenta con un marco adecuado para gestionar el riesgo de liquidez el cual se encuentra en consonancia con los principios definidos en la estrategia, tendiente a gestionar este riesgo de manera efectiva, viable y consistente, de modo tal de permitir asegurar niveles suficientes de liquidez en todo momento.

Habida cuenta que las características del proceso de gestión de los riesgos en general, y del de liquidez en particular, hacen del mismo una actividad dinámica y en cambio permanente. Los lineamientos y políticas instrumentadas a través de los procedimientos existentes a la fecha o que se implementen en el futuro, deben ser revisadas periódicamente de modo tal de garantizar su alineamiento con las condiciones del mercado, fijando como periodicidad máxima para ello de un año.

Complementariamente, la gestión del riesgo de liquidez no puede de modo alguno soslayar los puntos de contacto con el riesgo de crédito, de tasa de interés, de mercado, operacional y reputacional, dado que de producirse un impacto negativo en alguno o algunos de ellos, se verificaría un correlato como mínimo similar sobre la liquidez del Banco.

El personal involucrado en el proceso de la gestión del riesgo de liquidez debe ser técnicamente calificado, y ante un panorama de esta complejidad, contar a su vez con los recursos necesarios para llevar a cabo su tarea sin dificultades, canalizando sus actividades a través de los procesos y sistemas implementados y a implementar en el futuro.

Adicionalmente, y considerando la importancia de este riesgo en el conjunto del proceso de gestión integral de riesgos inherentes a las Entidades Financieras, el Banco trata los temas relacionados con la gestión de la liquidez en el ámbito del Comité de Finanzas, mientras que los temas relacionados a la gestión del riesgo de liquidez está a cargo del Comité de Riesgos, sobre el que el Directorio delega la tarea de implementar el marco de tratamiento de este riesgo, todo ello en consonancia con las pautas estratégicas y los lineamientos fijados.

Estrategia

La estrategia de administración de riesgo de liquidez consiste esencialmente en el establecimiento de las pautas generales e integrales con las que el Banco enfrenta el tratamiento de este riesgo. Dichas pautas persiguen el propósito de proteger la solvencia financiera y la capacidad para enfrentar situaciones de estrés en el mercado.

En virtud de ello, las decisiones que se adopten en materia de administración de fondos deben velar en todo momento por el mantenimiento de un nivel de activos líquidos, que permita atender los eventuales retiros de vencimientos contractuales, las potenciales oportunidades de inversión y la demanda de crédito, observando permanentemente las disposiciones normativas emanadas del BCRA.

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El Banco lleva a cabo las operaciones de intermediación financiera en un marco prudencial, preservando en todo momento adecuadas reservas de liquidez, con los que eventualmente se puedan cubrir las necesidades de liquidez en situaciones normales, y los que se pueden generar durante períodos de estrés. Todas las disposiciones que se adopten deben estar alineadas permanentemente con una conducta prudencial, de modo tal que la optimización de la colocación de los excedentes en ningún momento pueda poner en riesgo la capacidad del Banco para hacer frente a sus compromisos con terceros, independientemente de que éstos pertenezcan al sector público o privado.

Desde la óptica de la captación de fondos, debe tenerse presente en todo momento, que si bien, el hecho de ser Agente Financiero de la Provincia brinda un flujo de fondos neto significativo, bajo ningún concepto debe dejarse de lado la incentivación hacia el sector privado, para que el mismo opere con nuestro Banco tendiendo a conservar y aumentar el nivel de captación de fondos proveniente de este sector económico. Como complemento de ello, es importante remarcar que el objetivo de conservar y aumentar la captación de depósitos, para de diversificar las fuentes de fondeo, no debe cumplimentarse exclusivamente en base al incentivo de la tasa de interés, dado que ello, podría atraer a inversores netamente especulativos.

Además, la actuación como Agente Financiero de la Provincia y la concentración de depósitos que esto genera, obliga a mantener una comunicación fluida con los responsables de la administración de dichos recursos, para poder de esta manera anticipar futuros movimientos de ingresos y egresos de fondos.

Por lo expuesto, las bases estratégicas que deben guiar el accionar en lo que hace a la gestión de la liquidez, están estructuradas esencialmente sobre dos pilares, conformados por la estrategia de captación de fondos y la de colocación de los excedentes financieros de manera prudencial. Proceso

El Banco cuenta con un proceso para identificar, evaluar, seguir, controlar y mitigar el riesgo de liquidez, para garantizar el cumplimiento de la estrategia y política, a partir de controles y procedimientos internos que hacen al funcionamiento del sistema de gestión del riesgo.

Este proceso involucra entre otros lo siguiente:

• Administración de bandas temporales.

• Estudio de la estructura de depósitos.

• Medición de requerimientos netos de fondos bajo escenarios, incluyendo pruebas de estrés.

• Seguimiento de índices de liquidez.

• Acceso a los mercados.

• Planificación de la contingencia.

A continuación se detallan los principios y lineamientos del proceso.

Lineamientos generales

El Comité de Finanzas articula su accionar con la Gerencia General y la Gerencia de Finanzas, unificando los procedimientos y las herramientas de control para facilitar una adecuada gestión de la liquidez a lo largo de todo el Banco y considerando la totalidad de las sucursales. Está bajo la órbita de la Gerencia de Finanzas la proyección del flujo de fondos, los cálculos de excedentes y su inversión, entre otras tareas, todo ello bajo la coordinación operativa de la Gerencia General y en orden y consonancia con las responsabilidades de los órganos de Dirección y Funcionarios definidas precedentemente.

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El Comité de Riesgos, articula sus acciones con la Gerencia General y la Gerencia de Riesgos. Es responsabilidad de la Gerencia de Riesgos, las actividades de identificación, cuantificación y control de riesgos mediante el establecimiento de límites de tolerancia al riesgo a partir de las herramientas de medición establecidas al efecto.

Finalmente, cabe señalar que para la adecuada gestión del riesgo de liquidez, el Directorio ratifica la permanente aplicación de los principios prudenciales que guían el accionar del Banco en lo que respecta a la valuación de los distintos instrumentos que conforman los activos financieros del Banco. En este marco, se considera que estas valuaciones pueden sufrir un deterioro en condiciones de estrés, debiéndose considerar esta situación al evaluar la factibilidad e impacto que las ventas de activos en tales situaciones pueden tener sobre su posición de liquidez.

Los principios y lineamientos que deben seguirse para que el Banco cuente en todo momento con un marco adecuado para la eficiente gestión de este riesgo se enuncian seguidamente: i) Interacción con riesgo de tasa de interés y mercado En forma paralela a la evaluación del riesgo de liquidez y como parte de inseparable consideración, las áreas y funcionarios involucrados en la gestión del riesgo de liquidez deben analizar permanentemente la incidencia del riesgo de tasa de interés involucrado en las decisiones que adopten, de manera que ellas tengan en consideración no sólo el objetivo de conservar el patrimonio de la Entidad, sino también alcanzar y maximizar la rentabilidad esperada. ii) Flujos de fondos futuros de activos y pasivos La gestión de este riesgo exige que se deba realizar una proyección integral de los flujos de fondos líquidos estimados para afrontar la operatoria normal que involucra activos, pasivos y operaciones fuera de balance si corresponde (consideraciones que surjan de la evaluación de registros en cuentas de orden, en notas al pie de balances u otras manifestaciones que impliquen necesidad o disponibilidad de fondos), para un apropiado horizonte temporal, siendo imprescindible a estos efectos contar con información confiable provista en tiempo y forma.

En todo momento se requiere adoptar medidas conducentes para asegurar la disponibilidad de razonables niveles de liquidez para atender los compromisos financieros en un marco de estricto cumplimiento de la normativa del Banco Central en materia de Efectivo Mínimo. iii) Fuentes de provisión de liquidez y riesgos asociados Las proyecciones deben tener presente en todo momento la particular situación derivada de ser Agente Financiero de la Provincia y la exigencia que ello implica.

Se realizan los esfuerzos necesarios para establecer y mantener relaciones para la provisión de liquidez con contrapartes habituales. La frecuencia de los contactos y del uso de fondos se considera un indicador de fortaleza aunque se debe evitar la generación de dependencia concentrada en determinadas fuentes de financiamiento, ya sea por su consideración individual o por la modalidad operativa.

Se analizan las condiciones del mercado en forma periódica a fin de decidir la realización de activos en forma oportuna si la situación así lo exige. Como parte de la gestión general de riesgos, se puede también recurrir a la contratación de instrumentos derivados estimados convenientes para administrar exposiciones de riesgo por concentración en tipos de tasas de interés o moneda, o para cubrir otros riesgos patrimoniales.

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iv) Operatoria en moneda extranjera A la hora de considerar descalces de moneda se tiene especialmente en cuenta posibles restricciones para obtener fondeo en el mercado, particularmente cuando se manifiestan cambios bruscos en las cotizaciones y por tanto se afecte la liquidez de aquél.

Atendiendo lo mencionado precedentemente, se mantiene un sistema de medición, monitoreo y control de liquidez de las principales monedas, generando estrategias diferenciadas para la/s moneda/s de mayor significación en las transacciones.

Por último, cabe evaluar permanentemente el riesgo de ajustes en el tipo de cambio, no sólo por su eventual incidencia en la liquidez, sino también por la necesidad de alcanzar y conservar los objetivos estratégicos de posicionamiento en moneda extranjera. v) Actividades de corresponsalía, custodia y liquidación Periódicamente se debe evaluar el eventual impacto y probabilidad de ocurrencia de sucesos que puedan incrementar significativamente las necesidades de fondos por estas circunstancias. vi) Límites La observancia de las pautas establecidas en la estrategia de liquidez atendiendo los lineamientos esbozados en las políticas, debe exteriorizar el nivel de riesgo que se está dispuesto a aceptar.

El seguimiento y control del riesgo de liquidez debe integrar un proceso sistémico y dinámico, contemplando horizontes de proyección acordes con las situaciones que se planteen en cada momento y que atiendan tanto al movimiento normal de los flujos de fondos como a circunstancias estacionales y eventuales que los afecten.

Está en la órbita de la Gerencia de Finanzas proponer los límites sobre los descalces de fondos acumulados para las diferentes bandas temporales, teniendo en cuenta la probabilidad de impacto de condiciones previstas en escenarios de estrés. Los fundamentos tenidos en cuenta para ello deben ser puestos a consideración de la Gerencia General y el Comité de Finanzas.

Idéntico lineamiento se sigue para definir los límites máximos positivo y negativo de la Posición Global Neta en moneda extranjera y establecer los límites para inversión por tipo de instrumento. vii) Respaldo de liquidez Como corolario del espíritu prudencial que guía el accionar del Directorio, se establece que la Gerencia de Finanzas debe mantener un colchón de liquidez conformado por activos líquidos de alta calidad no afectados a otras operaciones, a fin de afrontar exigencias de cualquier naturaleza que se pudieran presentar.

Dichos activos deben ser de completa y libre disponibilidad.

Los lineamientos sobre magnitud del colchón de liquidez son consensuados en el ámbito del Comité de Finanzas, debiendo dejar constancias en actas que son puestas a consideración del Directorio. RIESGO DE MERCADO Definición de riesgo de mercado

Se entiende por riesgo de mercado a la probabilidad de sufrir pérdidas, en posiciones dentro y fuera de balance, a raíz de movimientos adversos en los precios de mercado de diversos activos, como ser acciones, instrumentos financieros de renta fija y de renta variable registrados en la cartera de negociación y activos denominados en moneda extranjera.

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Principales riesgos identificados:

• Concentración de las inversiones realizadas con excedentes en pocas aplicaciones rentables. • Toma de posiciones dentro y fuera de balance, en monedas y títulos valores afectadas por la

volatilidad de sus cotizaciones. Política

El Banco cuenta con un marco adecuado para gestionar el riesgo de mercado el cual se encuentra en consonancia con los principios definidos en la estrategia, tendiente a gestionar este riesgo de manera efectiva, viable y consistente de modo tal de asegurar niveles de riesgo aceptables en todo momento.

Habida cuenta que las características del proceso de gestión de los riesgos en general y del de liquidez en particular hacen del mismo una actividad dinámica y en cambio permanente, los lineamientos y políticas instrumentadas a través de los procedimientos existentes a la fecha o que se implementen en el futuro, deben ser revisadas periódicamente para garantizar su alineamiento con las condiciones del mercado, fijando como periodicidad máxima el plazo de un año.

La exposición al riesgo de mercado es controlada a través de límites de riesgo genéricos de exposición y límites específicos a instrumentos financieros. El Banco solamente opera en los diferentes negocios o mercados mediante productos autorizados. Estrategia

El objetivo de nuestra estrategia de administración de riesgo de mercado consiste esencialmente en el establecimiento de las pautas generales e integrales con las que el Banco asume el tratamiento de este riesgo. Dichas pautas persiguen el propósito de proteger la liquidez y solvencia, el nivel de tolerancia al riesgo de mercado y la capacidad para enfrentar situaciones de estrés en el mercado.

Los lineamientos generales para la administración del riesgo de mercado definido, tienen como objetivo establecer las bases para: • Mantener una seguridad razonable frente a la conservación y generación de valor de las

inversiones de tesorería del Banco, representada en inversiones negociables y otras operaciones de tesorería realizadas, de acuerdo con el perfil de riesgo aprobado por el Comité de Riesgos del Banco.

• Monitorear y generar alertas sobre posibles comportamientos críticos del mercado que puedan impactar el valor del portafolio del Banco, para emprender en forma oportuna las acciones preventivas y/o correctivas necesarias.

• Conocer y gestionar el riesgo y la eficiencia relativa a las posiciones de liquidez, la solvencia y las inversiones de tesorería del Banco.

• Administrar adecuadamente las inversiones de tesorería, buscando maximizar la rentabilidad de los recursos mediante una adecuada administración del riesgo.

Proceso

El Banco cuenta con un proceso para identificar, evaluar, seguir, controlar y mitigar el riesgo de mercado, para garantizar el cumplimiento de la estrategia y política, a partir de controles y procedimientos internos que hacen al funcionamiento del sistema de gestión del riesgo.

A continuación se detallan los principios y lineamientos del proceso.

Lineamientos generales

El Comité de Finanzas articula su accionar con la Gerencia General y la Gerencia de Finanzas, unificando los procedimientos y las herramientas de control para facilitar una adecuada gestión del riesgo de mercado. Está bajo la órbita de la Gerencia de Finanzas la proyección del flujo de fondos, los cálculos de excedentes y su inversión, entre otras tareas, todo ello bajo la

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coordinación operativa de la Gerencia General y en orden y consonancia con las responsabilidades de los órganos de Dirección y Funcionarios definidas precedentemente.

El Comité de Riesgos, articula sus acciones con la Gerencia General y la Gerencia de Riesgos. Es responsabilidad de la Gerencia de Riesgos, las actividades de identificación, cuantificación y control de riesgos mediante el establecimiento de límites de tolerancia al riesgo y partir de las herramientas de medición establecidas para tal efecto.

Finalmente cabe señalar que para la adecuada gestión del riesgo de mercado, el Directorio ratifica la permanente aplicación de los principios prudenciales que guían el accionar del Banco en lo que respecta a la valuación de los distintos instrumentos que conforman los activos financieros. En este marco, se considera que estas valuaciones pueden sufrir un deterioro en condiciones de estrés, debiéndose considerar esta situación para evaluar su impacto, formalizar e instrumentar los planes de mitigación que sean necesarios.

Los principios y lineamientos que se siguen para que el Banco cuente en todo momento con un marco adecuado para la eficiente gestión de este riesgo se enuncian seguidamente:

i) Especificación de factores de riesgo de mercado

La decisión del Banco de asumir posiciones, ya sea en carácter de inversión o negociación, surge del análisis de distintos factores de riesgo tales como volatilidad, tasa interna de retorno, oportunidades alternativas de inversión, expectativas de evolución de precios a mediano plazo, tipos de cambio, y la existencia de restricciones normativas.

De igual manera, y vinculado con las colocaciones de excedentes financieros, se efectúan evaluaciones sobre riesgo de mercado, considerando como tal el riesgo de que no se pueda compensar o deshacer una posición a precio de mercado debido a que ésta no cuenta con suficiente mercado secundario o bien porque existen perturbaciones en el mercado.

Los factores de riesgo de mercado que sean relevantes, son incluidos como factores de riesgo en los modelos de medición.

Límites

Por naturaleza, las operaciones de tesorería realizadas por la Gerencia de Finanzas exponen al Banco a diferentes riesgos. De tal manera, las operaciones de tesorería deben ejecutarse dentro de los límites establecidos, para asegurar que el impacto en caso de materializarse los eventos de riesgo, no afecten de manera significativa el negocio.

Los límites establecidos para el manejo de riesgos en el área de tesorería deben ser consistentes con los límites globales definidos para el Banco. La situación respecto a los límites es revisada periódicamente por el Comité de Finanzas y de Riesgos, con el fin de realizar los ajustes necesarios de acuerdo al comportamiento del mercado y sus participantes y a las estrategias definidas por el Banco.

ii) Cupos y riesgo de contraparte Para la medición del riesgo de contraparte, el Banco realiza una evaluación sobre los Bancos, Fondos Fiduciarios, Agentes de Bolsa y cualquier otra sociedad o institución financiera con las que se prenda realizar operaciones y que sean posibles intermediarios del Banco, para determinar con cuál de ellas se efectúan las operaciones.

El proceso de medición de riesgos de contraparte considera aspectos fundamentales en el conocimiento de la entidad objeto del estudio, como ser la identificación de variables o razones financieras, información cualitativa de la entidad y sus directivos; información pública proveniente de firmas calificadoras, composición de las inversiones y políticas de inversión, entre otros.

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iii) Valuación de posiciones en la cartera de negociación El Banco lleva a cabo sus operaciones con instrumentos financieros en un marco prudencial, preservando en todo momento adecuadas reservas de liquidez con los que eventualmente se pueda hacer frente a movimientos bruscos del mercado. Bajo este marco, el Banco desarrolla prácticas prudentes de valuación y contabilización de sus instrumentos financieros, a fin de reflejar el valor de mercado de dichos instrumentos de manera razonable.

Estas prácticas de valuación y contabilización están soportadas por políticas y procedimientos que definen, entre otras cosas, las funciones y responsabilidades dentro del proceso, las fuentes de información para la captura de valores y precios de mercado. RIESGO DE TASA DE INTERES Definición de riesgo de tasa de interés

Se entiende por riesgo de tasa de interés a la posibilidad de que se produzcan cambios en la condición financiera de una entidad como consecuencia de fluctuaciones en las tasas de interés, pudiendo tener efectos adversos en los ingresos financieros netos del Banco y en su valor económico.

Las principales fuentes de riesgo de tasa de interés resultan de:

• los diferentes plazos de vencimiento y fechas de reajustes de tasa para los activos, pasivos y tenencias fuera de balance de la entidad

• las opciones implícitas en determinados activos, pasivos y conceptos fuera de balance de la entidad financiera, como los préstamos con cláusulas de cancelación anticipada.

• el riesgo de base, que contempla posibles compensaciones provenientes de posiciones con signos opuestos en una misma banda temporal y,

• el riesgo de movimientos no paralelos en la curva, que mide las posibles compensaciones entre posiciones situadas con distintos horizontes temporales.

Política

El Banco cuenta con un marco adecuado para gestionar el riesgo de tasa de interés el cual está en consonancia con los principios definidos en la estrategia, tendiente a gestionar este riesgo de manera efectiva, viable y consistente de modo tal de permitir y asegurar niveles de riesgo aceptables en todo momento.

Habida cuenta que las características del proceso de gestión de los riesgos en general y del de liquidez en particular, hacen del mismo una actividad dinámica y en cambio permanente, los lineamientos y políticas instrumentadas a través de los procedimientos existentes a la fecha o que se implementen en el futuro, deben ser revisadas periódicamente para garantizar su alineamiento con las condiciones del mercado, fijando como periodicidad máxima para ello el plazo de un año.

Solo se realizan transacciones con productos y mercados en los que se posean conocimiento y capacidades que proporcionen una gestión de riesgo eficaz y proactiva. Se realiza una gestión de riesgo para controlar las exposiciones en las diferentes líneas de productos mediante la evaluación y mejora continua de las políticas y procedimientos vigentes.

Estrategia

En términos generales, la estrategia de administración de riesgos definida por el Banco, pretende proteger la liquidez, la solvencia, el nivel de tolerancia al riesgo establecido y la capacidad para enfrentar situaciones de estrés en el mercado.

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En este sentido, el Banco ha definido las políticas en materia de administración de riesgo de tasa, las cuales representan los lineamientos de administración de este riesgo y que se esperan aplicar, proporcionando las pautas a tener en cuenta para operar en el mercado.

A fin de minimizar los perjuicios que potencialmente pudieran ser originados por fluctuaciones inesperadas en los mercados financieros, la Entidad efectúa el seguimiento, la medición y el control de su exposición a los riesgos de liquidez, tasas de interés y precios, y establece o modifica las políticas a seguir en la materia, cuando ello resulte necesario.

Siendo éstas las pautas estratégicas para el tratamiento del riesgo de tasa de interés, la política específica que se detalla a continuación sienta las bases para que la construcción del marco de tratamiento de este riesgo contemple todo el instrumental necesario para abordarlo de manera integral, esto es, fijando claramente los principios básicos para su gestión y las características del proceso en cuestión. Proceso

El Banco cuenta con un proceso para identificar, evaluar, seguir, controlar y mitigar el riesgo de tasa de interés, para garantizar el cumplimiento de la estrategia y política, a partir de controles y procedimientos internos que hacen al funcionamiento del sistema de gestión del riesgo. A continuación se detallan los principios y lineamientos del proceso. Lineamientos generales

La Gerencia de Finanzas monitorea periódicamente la estructura de balance de acuerdo a lo definido por el Directorio y la Gerencia General a partir de los objetivos estratégicos de la organización. De tal manera la estructura de balance debe estar alineada con las proyecciones de crecimiento y las estrategias de apalancamiento y financiación de las posiciones activas de la entidad.

El Comité de Finanzas debe analizar la brecha de tasa de interés actual y proyectada del Banco, concluir acerca de lo adecuado de las tasas de colocación de los créditos de acuerdo a la situación del mercado y a las posibilidades de apalancamiento mediante captación de recursos del público, por medio de obligaciones pasivas con otras instituciones financieras, y por su función de agente financiero y caja obligada de la Provincia.

La Gerencia de Riesgos monitorea el cumplimiento de los límites e informa al Comité de Riesgos. Para su control se realiza el seguimiento de los descalces en la repactación de las tasas de interés activas y pasivas, y en la evolución de las posiciones netas de tasas de interés de la entidad entre activos y pasivos.

Asimismo, se efectúan análisis de escenarios para evaluar el efecto en el margen financiero de la entidad ante variaciones de tasas de interés fijas y variables.

Los principios y lineamientos del proceso se siguen para que el Banco cuente en todo momento con un marco adecuado para la eficiente gestión de este riesgo. Medición y control del riesgo de tasa de interés. El Banco lleva a cabo sus operaciones de intermediación financiera en un marco prudencial, soportado por políticas, procedimientos y metodologías que permiten analizar el contexto de mercado e identificar, evaluar y controlar los riesgos inherentes al negocio.

En lo referido específicamente a la medición del riesgo de tasa de interés el Banco considera dos enfoques básicos para un adecuado monitoreo de este riesgo y un seguimiento continuo complementado con análisis de posibles escenarios de comportamiento de tasa de interés del mercado. Los enfoques que utiliza para evaluar este riesgo son:

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• Enfoque de ingresos financieros netos: Se basa en el análisis de la incidencia de un cambio de tasas de interés en los ingresos devengados o previstos. Así mismo, se puede monitorear el margen financiero del negocio y sus cambios en el tiempo y la relación entre productos activos y sus fuentes de financiamiento.

• Enfoque de valor económico: Reconoce que los cambios en las tasas de interés afectan el valor económico de los activos, pasivos y las posiciones fuera de balance. Así, el valor económico de la entidad financiera está dado por el valor presente de los flujos de fondos esperados de la entidad, es decir, de los flujos de fondos esperados de los activos netos de los pasivos más posiciones netas fuera de balance. Este enfoque brinda una visión más integral de los efectos potenciales de largo plazo provenientes de variaciones de las tasas.

• Adicionalmente, el cálculo de margen financiero por bandas de tiempo, determinando las tasas promedio para las posiciones activas, pasivas y fuera de balance, por tipos de producto, carteras, regionales u otras segmentaciones, y el cálculo de la rentabilidad promedio de cada una de las segmentaciones definidas, permite analizar el efecto de la brecha de tasa de interés en la rentabilidad financiera del Banco.

i) Interacción con riesgo de liquidez y mercado En forma paralela a la evaluación del riesgo de tasa de interés y como parte de inseparable consideración, las áreas y funcionarios involucrados en la gestión del riesgo de tasa de interés deben analizar permanentemente la incidencia del riesgo de liquidez involucrado en las decisiones que adopten, de manera que ellas tengan en consideración no solo el objetivo de conservar el patrimonio de la Entidad, sino también alcanzar y maximizar la rentabilidad esperada. ii) Límites. Por naturaleza, las operaciones activas y pasivas realizadas por el Banco lo exponen a los diferentes riesgos de tasa de interés, de acuerdo a las definiciones previamente presentadas en este documento. De tal manera, estas operaciones deben ejecutarse dentro de los límites establecidos y aprobados por el Comité de Finanzas y el Directorio, para asegurar que el impacto en caso de materialización de eventos de riesgo, no afecte de manera significativa el negocio. c) RIESGO OPERACIONAL

Definición de riesgo operacional

El Banco de Corrientes ha adoptado el concepto de riesgo operacional alineado con la Com. “A” 4793 y complementarias del Banco Central de la República Argentina y las mejores prácticas internacionales, consistente en el riesgo de pérdidas resultantes de la falta de adecuación o fallas de los procesos internos, de la actuación del personal o de los sistemas o bien, aquellas que sean producto de eventos externos. Este concepto también comprende al riesgo legal.

Conforme a ello se aclara que el riesgo legal comprende, entre otros aspectos, la exposición a sanciones, penalidades u otras consecuencias económicas y de otra índole por incumplimiento de normas u obligaciones contractuales y que pueden deberse a factores endógenos o exógenos a nuestra entidad.

Asimismo, nuestra entidad ha adoptado un enfoque metodológico para la gestión del riesgo operacional, fomentando mejoras continuas en las prácticas de evaluación, que le permitan: la identificación, evaluación, seguimiento, control y mitigación de los diversos riesgos que hacen al negocio.

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Política

En ese sentido, el BanCo cuenta con políticas, procedimientos y estructuras de control para las distintas actividades de negocios o de soporte, para prevenir y/o mitigar la ocurrencia de pérdidas significativas, debidas a eventos de riesgos operativos.

El Directorio de Banco de Corrientes S.A. considera que la Gestión Operativa, entendida como la implementación sistemática de normas y estándares de procedimientos internos en pos de la eficiencia de la empresa, constituye una fuente de creación de valor para el accionista y un requisito indispensable para preservar la confianza de la clientela y de la sociedad en general.

Las políticas representan a su vez, pautas de actuación necesarias para que la Integridad Corporativa se manifieste en las relaciones establecidas con clientes, empleados y directivos, proveedores y terceros en general (integridad relacional y organizativa).

La apropiada aplicación de las políticas y procedimientos determinados requiere de los responsables de su gestión e implementación: conocimiento de su contenido, de sus desarrollos tecnológicos complementarios y de aquellas disposiciones legales relevantes que resulten de aplicación a las actividades que desarrollan conforme lo determinan sus funciones y responsabilidades. Dicha aplicabilidad, en ningún caso, podrá dar lugar a la vulneración de las disposiciones legales aplicables. De ser apreciada tal circunstancia, las ejecuciones prácticas deberán ajustarse a lo previsto en dichas disposiciones legales.

En relación a los requisitos mínimos de gestión, implementación y control de los riesgos relacionados con tecnología informática, sistemas de información y recursos asociados, el Banco conforme a la Metodología de Análisis y Gestión de Riesgos de Sistemas adoptada, apunta a tener un adecuado proceso de administración del riesgo en ese ámbito, con procedimientos que contemplan la identificación de procesos y el establecimiento de controles y dispositivos que brinden la mayor seguridad a las operaciones y sistemas de información.

Negocios

El Banco de Corrientes S.A. es una empresa en crecimiento que se concentra en los depósitos, préstamos y servicios al cliente y que aumenta, de manera controlada, los activos de calidad ponderados según el nivel de riesgo.

El desarrollo de los negocios se caracteriza por un estricto cumplimiento de la Legalidad, que exige asumir sin excepciones la obligación de observar la legislación aplicable a las distintas actividades y operaciones del Banco de Corrientes S.A. y a las actuaciones relacionadas con ellas.

Tecnología

El Banco de Corrientes S.A. utiliza la tecnología para facilitar a clientes las operaciones de negocios recíprocos, propendiendo a un proceso continuo de rediseño de negocios mediante la automatización mejorada de sus principales productos y servicios. La red de servicios tiende a ajustarse a las necesidades de sus clientes a quienes día a día se proporciona más acceso al autoservicio y a la banca electrónica.

Protección de bienes y recursos

Con independencia de las responsabilidades específicamente asignadas por el Banco de Corrientes a determinadas áreas de su organización en materia de salvaguarda de activos, bienes materiales e intangibles (conjuntamente, los recursos) de su propiedad, todos los agentes del Banco tienen las siguientes responsabilidades u obligaciones:

• Utilizar los recursos de forma eficiente y apropiada, y únicamente para el desempeño de su actividad profesional en el Banco de Corrientes S.A., o para aquellos supuestos que pudieran estar previstos en la correspondiente normativa interna.

• Proteger los recursos y preservarlos de aquellos usos inadecuados de los que pudieran derivarse perjuicios económicos o deterioro de la reputación del Banco.

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• Salvo en los casos específicamente previstos por la normativa interna, no está permitido disponer de los recursos propiedad del Banco, y de aquellos otros entregados en custodia por terceros (dentro de los que se encuentra cualquier tipo de información referida a los mismos) fuera de las instalaciones del Banco.

• En caso de cese del vínculo, todos los funcionarios asumen que el trabajo desarrollado para el Banco de Corrientes S.A., tenga o no la consideración de propiedad intelectual, pertenece exclusivamente y en su integridad al Banco. En ese sentido los informes, propuestas, estudios, programas y cualquier otro producto derivado de la actividad profesional en el Banco, quedarán en posesión de este último, sin que la persona saliente pueda copiar, reproducir o transmitir los mismos en forma alguna sin autorización escrita del Directorio del Banco de Corrientes S.A. Por tal motivo, los funcionarios se comprometen a devolver el material de propiedad del Banco, que tengan en su poder en el momento de cesar en su actividad en el mismo.

Estrategia

En términos generales, la estrategia de administración de riesgos definida por el Banco, pretende protegerse adecuadamente de las potenciales pérdidas que pudieran resultar de la falta de adecuación o fallas de los procesos internos, de la actuación del personal o de los sistemas o bien, aquellas que sean producto de eventos externos.

El marco para la gestión del riesgo operacional incluye una Unidad específica e independiente de las unidades de negocios o de soportes involucradas, la cual depende de la Gerencia de Riesgos y está a cargo de un Responsable para el monitoreo y seguimiento de la gestión de este tipo de riesgos. Sus tareas incluyen identificar los distintos riesgos operacionales; proponer e instalar metodologías de medición y seguimiento, implementar políticas y procedimientos de minimización o cobertura de los mismos; controlar que estos se mantengan dentro de parámetros aceptables y coordinar mitigantes o planes de mitigación con los distintos responsables, a fin de asegurar la acción coordinada con los sectores que los administran.

A su vez, se desarrollan acciones tendientes a insertar la cultura del riesgo operacional en toda la organización, dando a conocer sus principales aspectos a través de una adecuada comunicación interna, así como a través de programas de capacitación a todo el personal del Banco.

Adicionalmente, antes de lanzar o presentar nuevos productos y servicios, actividades, procesos o sistemas, se evalúa el riesgo operacional inherente conforme a los procedimientos previstos en normas internas.

Como estrategia de prevención, se cuenta con un Plan de Contingencia Máxima y Planes de Contingencia parciales, destinados a asegurar una rápida respuesta ante eventuales incidentes que puedan poner en riesgo la continuidad operativa del Banco.

A partir de la Comunicación “A”5203 del B.C.R.A., y más tarde la Comunicación “A”5398, nuestra Entidad ha llevado adelante gestiones para adecuar la administración de sus riesgos a los lineamientos establecidos en dichas normativas.

Por su parte, las Auditorías Interna y Externa revisan el marco de gestión.

Proceso

El Banco cuenta con un proceso para identificar, evaluar, seguir, controlar y mitigar el riesgo operacional, para garantizar el cumplimiento de la estrategia y política, a partir de controles y procedimientos internos que hacen al funcionamiento del sistema de gestión del riesgo.

A continuación se detallan los principios y lineamientos del proceso.

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Lineamientos generales

El Sistema de Gestión de Riesgo Operacional, es entendido como el conjunto de políticas, procedimientos y metodologías de análisis, los roles y responsabilidades de los actores intervinientes, los esquemas de comunicación y tratamiento de la información y los resultados obtenidos, deberá ser sometido a exámenes periódicos que permitan establecer la integridad, validez y suficiencia de estos componentes, además de tender a la continua mejora de los mismos.

Los objetivos para la implementación del Sistema de Gestión de Riesgo Operacional son los siguientes:

• Identificar en todos los procesos cada uno de los eventos de riesgo, establecer un perfil de riesgo operativo para cada proceso y para la entidad.

• Asegurar que los controles se ajusten en la medida que se desarrolle la cultura de prevención de riesgos operacionales.

• Identificar los cambios en los controles y los factores de riesgos operativos. • Establecer las metodologías de identificación, evaluación, mitigación y control de los riesgos

operativos. • Divulgar el sistema y capacitar a los funcionarios en cada una de las etapas que se

implementen. • Asegurar que cualquier evento de pérdida pueda ser registrado. • Velar por que el riesgo operativo sea controlado y minimizado permanentemente. • Asegurar la actualización y verificación del proceso de gestión de Riesgos Operacionales, así

como la permanente divulgación y capacitación. • Asegurar el cumplimiento de normas internas y externas. • Desarrollar, implementar y mantener adecuados planes de contingencias y de continuidad del

negocio.

Asimismo, se entiende a la gestión como un proceso dinámico y continuo que comprende las siguientes etapas: identificación, evaluación, seguimiento y control o mitigación de los riesgos inherentes. La adecuada valoración de cada uno de estos aspectos nos permitirá evaluar nuestra vulnerabilidad respecto de cada uno de los riesgos identificados y adoptar las acciones necesarias y suficientes para neutralizarlos o administrarlos convenientemente.

A tales efectos, se reconocen y se ejemplifican seguidamente los principales eventos que caracterizan a las pérdidas vinculadas con el riesgo operacional, las cuales deberán ser reconocidas por todos los niveles de la organización e informadas, cada vez que se sucedan para ser compiladas en una base de datos:

• Fraude interno • Fraude externo • Relaciones laborales y seguridad en el puesto de trabajo • Prácticas con los clientes, productos y negocios

• Daños a activos físicos • Alteraciones en la actividad y fallos en los sistemas • Ejecución, gestión y cumplimiento del plazo de los procesos Los principios y lineamientos del proceso que se siguen para que el Banco cuente en todo momento con un marco adecuado para la eficiente gestión de este riesgo se indican seguidamente:

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i) Identificación y evaluación Entre las herramientas que utilizaremos para identificar y evaluar los riesgos operacionales podemos mencionar: • auto-evaluación: proceso que incluye la determinación y entrevistas con grupos de trabajo

para redescubrir fortalezas y debilidades del entorno de riesgo operacional; • asignación o “mapeo de riesgos”: proceso que permite agrupar por tipo de riesgos a las

diferentes unidades de negocio, funciones organizativas o procesos, • base de eventos: recopilación de sucesos con o sin impacto contable que se relacionan con

fallas de los procesos internos, de la actuación del personal o de los sistemas o bien, aquellas que sean producto de eventos externos y

• otros indicadores de riesgos.

Nuestra Entidad ha implementado un proceso de autoevaluación de riesgos con participación directa de las áreas intervinientes en los principales procesos y sistemas, lo que permite conocer el grado de cumplimiento de los controles establecidos y actualizar el inventario de los riesgos operacionales identificados, interrelacionando también con la base de eventos.

ii) Seguimiento Este proceso se inserta en las actividades habituales de la entidad a los efectos de facilitar la rápida detección y corrección de las posibles deficiencias que se produzcan en la aplicación de las políticas, procesos y procedimientos de gestión del riesgo operacional.

Para ello junto al seguimiento y evaluación de los eventos de pérdidas operativas, se analiza la evolución de los indicadores a los fines de decidir sobre la necesidad o no de reformularlos en función de la naturaleza de los eventos de pérdida efectivamente producidos.

En función de ello el responsable de la Unidad de Gestión del Riesgo Operacional debe remitir al Gerente General, informes vinculados a los resultados del seguimiento realizado y las pertinentes propuestas de corrección en los procesos y procedimientos, cuando sea procedente.

Los informes mencionados precedentemente, una vez analizados por la Gerencia General y aprobadas las correcciones pertinentes, se distribuyen entre los niveles gerenciales correspondientes y las distintas áreas de la entidad que pudieran verse afectadas, a fin de que adopten dichas medidas correctivas. iii) Control y mitigación A los efectos de reducir la exposición a los riesgos operacionales significativos, se manifiesta el firme compromiso de mantener una sólida cultura de control interno, donde las actividades relacionadas con el control del riesgo operacional forman parte de los procesos diarios de la entidad; a su vez se establece que las estrategias de control y reducción de riesgos operacionales son analizadas anualmente y en base a los informes elaborados por la Gerencia General y el Responsable de la Unidad de Riesgo Operacional.

Complementariamente; se evalúan programas de cobertura de riesgo consistentes en la constitución de determinados montos mensuales que se registrarán bajo la modalidad de provisiones y con destino a un auto-seguro cuya aplicación en caso del acaecimiento del evento, será dispuesta por el Directorio, como alternativa para aquellos riesgos de impacto significativo y elevado costo de control. iv) Beneficios Esperados de la Gestión del Riesgo Operacional La gestión de riesgos operacionales está orientada fundamentalmente a proteger y agregar valor para la empresa y sus interesados mediante el apoyo a sus objetivos, por lo tanto debe:

• Proveer una metodología que permita que las actividades presentes y futuras se desarrollen de forma consistente, controlada y alineada a los objetivos del negocio.

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• Mejorar la toma de decisiones, la planificación y el establecimiento de prioridades mediante una visión más integrada y estructurada del negocio y las oportunidades y amenazas de los proyectos.

• Contribuir a una asignación más eficiente del capital y los recursos dentro de la organización. • Proteger los activos y, fortalecer y mejorar la imagen del Banco. • Desarrollar y apoyar el crecimiento personal y profesional de los empleados, quienes

constituyen la base de conocimientos del Banco. • Optimizar la eficiencia operacional:

Limitando la frecuencia e impacto de los eventos no deseados. Disminuyendo pérdidas y costos operativos. Aumentando la calidad de los productos, procesos y servicios.

v) Calculo del capital requerido por Riesgo Operacional

Al cierre de cada período bajo informe, el Banco de Corrientes determina su requerimiento de capital por riesgo operacional en base al método del indicador básico; conforme lo establecido por la Comunicación “A” 5272 del B.C.R.A. y cuyo resultado numérico se expone en los cuadros cuantitativos, correspondientes a este Régimen de Transparencia. No obstante, también se realiza dicho cálculo, en base a metodología propia.

d) RIESGO REPUTACIONAL

Marco Conceptual Conforme a los lineamientos establecidos por el Banco Central de la República Argentina, se entiende por riesgo reputacional como aquel que está asociado a una percepción negativa sobre la entidad financiera por parte de los clientes, contrapartes, accionistas, inversores, tenedores de deuda, analistas de mercado y otros participantes del mercado relevantes que afecta adversamente la capacidad de la entidad financiera para mantener relaciones comerciales existentes o establecer nuevas y continuar accediendo a fuentes de fondeo -tales como en el mercado interbancario o de titulización-.

El riesgo reputacional también puede afectar los pasivos de la entidad, debido a que la confianza del público y la capacidad de la entidad de captar fondos están fuertemente vinculadas con su reputación.

El riesgo reputacional puede conducir a una entidad financiera a otorgar un respaldo implícito, incurriendo en riesgos de crédito, liquidez, mercado y legal, con posibles incidencias negativas en sus resultados, liquidez y capital regulatorio.

Alineado con dichos concepto, para el Banco de Corrientes, el Riesgo Reputacional se define como la probabilidad de incurrir en pérdidas ocasionadas por una percepción negativa por parte de “terceros interesados” respecto de la confiabilidad, gobierno y compromisos con aquellos. En una institución financiera la reputación representa el "activo intangible" más importante que posee ya que de ella depende en última instancia su sostenibilidad económica.

Los terceros interesados o grupos de interés, entre otros son:

• Accionistas • Inversores o potenciales inversores • Acreedores • Proveedores • Clientes/contrapartes • Socios Estratégicos • Empleados • Gobiernos • Entes Reguladores • Comunidad en general

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Por su parte, algunas de las dimensiones o factores de impacto a tener en cuenta son los siguientes:

Resultados: crecimiento sustentable; riesgo controlado Gobierno Societario: integridad; ética, transparencia Producto: calidad, atención, precio Innovación: tecnología, propuesta novedosa, adaptación a cambios Ámbito y ambiente de Trabajo Liderazgo: visión de futuro Ciudadanía: compromiso social

La medición de este riesgo es muy dificultosa, pues las consecuencias financieras muchas veces son indirectas y su intensidad es muy variable, con un alto grado de incertidumbre, en consecuencia la mejor estrategia para la gestión de este riesgo es la adopción de estrictas medidas preventivas. Políticas

La gestión del riesgo de estratégico debe enmarcarse en los siguientes lineamientos:

• Desarrollo e Implementación de un Plan de Acción para la gestión del Riesgo Reputacional como una categoría específica de riesgo pero, dentro del marco de Gestión Integral de Riesgos, es decir que debe ser interpretado conjuntamente con el resto de las políticas y normas corporativas aplicables en la materia.

• Implementación de normas y procedimientos, asignación de recursos y estructura adecuadas a efectos de prevenir las eventuales percepciones negativas de los distintos grupos de interés y anticiparse a ellas, evitando o minimizando las consecuencias por dichas situaciones adversas.

• Considerar al momento de la elaboración de los planes de negocios y los requerimientos futuros de capital y cuando se evalúe el objetivo de suficiencia del capital en función de los riesgos, también la suficiencia de capital por riesgo reputacional en la medida en que resulte prudencial y se justifique su cuantificación como resultado del seguimiento de indicadores.

• La gestión de este riesgo debe comprender las siguientes dimensiones: o Acciones preventivas o Acciones proactivas o Acciones reactivas: Planes de crisis

Objetivos y Estrategias Los objetivos particulares para la administración de este riesgo son:

Identificación del Riesgo Reputacional y sus factores asociados Tratamiento del Riesgo Reputacional Favorecer el crecimiento del negocio

Para ello, las técnicas y procedimientos elaborados y a elaborarse deben seguir las siguientes pautas específicas:

• Asegurar el entendimiento de que:

Cada empleado es responsable de asegurar que sus acciones no comprometan la reputación de la empresa.

Cada empleado es responsable de escalar a su supervisor, cualquier tema que pueda ser identificado como Riesgo Reputacional.

Cada línea de negocio es responsable de tomar en cuenta el Riesgo Reputacional en sus asesoramientos para nuevos o existentes productos, servicios y/o transacciones.

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La clave de la gestión de riesgo reputacional está en gestionar las expectativas de los “terceros interesados” y mantener un adecuado ambiente de control.

• Evaluación del nivel en que los distintos factores de riesgo pudieran impactar en las expectativas de los distintos grupos de interés.

• Establecimiento de indicadores claves que permitan monitorear el comportamiento de aquellos factores evaluados como de impacto alto en el cumplimiento de las expectativas.

• Monitoreo en forma continua del Perfil del Riesgo Reputacional, identificando desvíos que requieran acciones correctivas a partir de reportes gerenciales y del establecimiento de un proceso periódico de validación de expectativas.

Marco de Gestión

El Banco de Corrientes concibe al Riesgo Reputacional como un proceso sistemático y continuo que le permite poder identificar, alinear, gestionar, controlar y monitorear los riesgos asociados, en base a los lineamientos establecidos por la Alta Gerencia y Directorio de la Entidad, esta visión conduce a la Alta Gerencia y a los distintos Comités intervinientes a una planificación y gestión de la organización para asegurar el cumplimiento de los objetivos. Un buen gobierno societario minimiza las posibilidades de situaciones crisis y/o su impacto.

La estructura organizativa posee las características necesarias para asegurar que la estrategia para la gestión del riesgo reputacional sea efectivamente y consistentemente implementada; entre los órganos cuya mayor injerencia tienen

• El Directorio es responsable de definir y aprobar el marco adecuado, estableciendo políticas y procedimientos generales respecto de la forma en que los mismos serán gestionados.

• El Comité de Gobierno Societario, entre otras funciones, es responsable de: verificar que las estrategias generales de negocios sean consistentes con las políticas adoptadas por el Banco, incluidas las de determinación de niveles aceptables de riesgos y verificar que la Alta Gerencia desarrolle procesos que permitan identificar, evaluar, monitorear, controlar y mitigar los riesgos asumidos, implemente integralmente las estrategias y políticas aprobadas por el Directorio y que implemente adecuados sistemas de control interno y monitoree su efectividad.

• El Comité de Etica, Desempeño y Relaciones Laborales, entre otras funciones, es responsable de: entre otras funciones, es responsable de: En caso de incumplimientos y/u inobservancia y/o transgresiones comprobados a la legislación y normativa vigente, incluido el Código de Ética, analizará y recomendará a la Gerencia General y/o al Directorio las sanciones a aplicar en cada caso, y el tenor de las mismas, teniendo en cuenta el daño concreto o potencial que aquellos causen a la Entidad, así como también toda aquella cuestión que oficie de atenuante y cuyo análisis y/o ponderación escape a las posibilidades de las áreas técnicas que intervienen o no hubiere sido tenido en cuenta por éstas últimas.

• El Comité de Riesgos es el responsable de vigilar el cumplimiento de las políticas que en materia de riesgos haya aprobado el Directorio, asegurando un enfoque integral de medición de los riesgos.

• Gerencia de Riesgos: elabora los reportes de seguimiento de políticas y límites para evaluación del Comité de Riesgos, realiza los cálculos de capital y pruebas de estrés.

e) RIESGO ESTRATÉGICO

Marco Conceptual

Conforme a los lineamientos establecidos por el Banco Central de la República Argentina, se entiende por riesgo estratégico al riesgo procedente de una estrategia de negocios inadecuada o de un cambio adverso en las previsiones, parámetros, objetivos y otras funciones que respaldan esa estrategia.

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Alineado con dicho concepto, para el Banco de Corrientes, el riesgo estratégico se define como la probabilidad de incurrir en pérdidas con impacto actual o futuro en los ingresos y el capital, derivada de erróneas decisiones de negocios, la aplicación incorrecta o inadecuada de los planes y estrategias de negocio aprobados, y/o la falta de capacidad de entendimiento y respuesta oportuna frente a los cambios o variaciones del mercado.

Los recursos y métodos aplicados para llevar a cabo las estrategias de negocios deben ser evaluados en relación con el impacto de los cambios económicos, tecnológicos, competitivos y regulatorios.

La principal herramienta que utiliza el Banco para la gestión de este riesgo es el plan de negocios anual y sus correspondientes pruebas de estrés presentadas al B.C.R.A. En este plan, las distintas áreas de negocio en conjunto con la Alta Gerencia de la Entidad definen las estrategias de negocio a seguir en los próximos ejercicios en base a su entendimiento y experiencia en el mercado financiero local y a la situación presente y proyectada de las distintas variables macroeconómicas que impactan en forma directa en los negocios del Banco. Cabe destacar que el plan de negocios y las mencionadas pruebas de estrés, una vez confeccionadas y definidas, son revisados y aprobados por el Comité de Riesgos.

Políticas

La gestión del riesgo de estratégico debe enmarcarse en los siguientes lineamientos:

• Desarrollar e Implementación de un Plan de Acción de Administración del Riesgo Estratégico como una categoría específica de riesgo, dentro del marco de Gestión Integral de Riesgos.

• Analizar y Evaluar adecuadamente todos los aspectos organizativos en la elección e implantación de estrategias, en especial con ciertas actividades poco frecuentes como fusiones y adquisiciones, alianzas, procesos de reestructuración y/o localización de nuevas sucursales o puntos de atención a clientes.

• Implementación de normas y procedimientos, asignación de recursos y estructura adecuadas a efectos de prevenir las eventuales reacciones adversas de los distintos grupos de interés y anticiparse a ellas evitando el riesgo de fracaso de la estrategia.

• Considerar al momento de la elaboración de los planes de negocios y los requerimientos futuros de capital y cuando se evalúe el objetivo de suficiencia del capital en función de los riesgos, también la suficiencia de capital por riesgo estratégico.

Objetivos y Estrategias

Los objetivos particulares para la administración de este riesgo son:

Entendimiento de los Objetivos y Planes Estratégicos

Identificación del Riesgo Estratégico

Evaluación y Cuantificación del Riesgo Estratégico

Tratamiento del Riesgo Estratégico

Favorecer el crecimiento del negocio

Para ello, las técnicas y procedimientos elaborados y a elaborarse deben seguir las siguientes pautas estratégicas:

• Transmitir y lograr un entendimiento profundo de los objetivos y estrategias del negocio a través de toda la organización. Relacionándolos con los procesos involucrados, los productos, servicios, los sistemas de información, servicios de terceros que le dan soporte, así como los responsables del mismo, para su registro, control, monitoreo y reporte.

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• Construir un enfoque basado en modelos de valor que ayuden a identificar y evaluar los riesgos que afectan las iniciativas y definiciones estratégicas y, permitan anticipar respuestas adversas, administrar la eventual crisis y convertirla en oportunidades de mejora.

• Monitoreo en forma continua del Perfil del Riesgo Estratégico aprobado, evaluando el cumplimiento de metas y objetivos a partir de reportes gerenciales.

• Diseño de planes de acción que permitan diversificar adecuadamente su estructura de capital y sus fuentes de financiamiento en el mercado, así como la colocación de sus productos y servicios, de modo de otorgar a la Organización, la mayor estabilidad y flexibilidad para apoyar su estrategia de negocios.

Marco de Gestión

El Banco de Corrientes concibe al Riesgo Estratégico como un proceso sistemático y continuo que le permite poder identificar, alinear, gestionar, controlar y monitorear los riesgos asociados, en base a los objetivos estratégicos establecidos por la Alta Gerencia y Directorio de la Entidad, esta evaluación conduce a la Alta Gerencia y a los distintos Comités intervinientes a una planificación y gestión de la organización para asegurar el adecuado cumplimiento de los objetivos. Para la formulación de la Estrategia, el Banco tiene en cuenta su estructura, las líneas de negocio claves y la diversidad de los productos con los que opera. La estructura organizativa posee las características necesarias para asegurar que la estrategia de riesgos sea efectivamente implementada. • El Directorio es responsable de definir y aprobar el marco adecuado, estableciendo políticas y

procedimientos generales respecto de la forma en que los mismos serán gestionados. • El Comité de Gobierno Societario, entre otras funciones, es responsable de: verificar que las

estrategias generales de negocios sean consistentes con las políticas adoptadas por el Banco, incluidas las de determinación de niveles aceptables de riesgos y verificar que la Alta Gerencia desarrolle procesos que permitan identificar, evaluar, monitorear, controlar y mitigar los riesgos asumidos, implemente integralmente las estrategias y políticas aprobadas por el Directorio y que implemente adecuados sistemas de control interno y monitoree su efectividad.

• El Comité de Finanzas determina las estrategias desde el punto de vista de gestión estructural del balance, evalúa y aprueba las acciones que se requerirán para el desarrollo de las estrategias, particularmente actúa en el manejo de la política de liquidez de la Entidad, realizando el seguimiento de la posición de liquidez y de los recaudos para el cumplimiento de la integración del efectivo mínimo y, evalúa y aprueba los planes de contingencia elaborados.

• La Gerencia de Finanzas determina y propone las acciones concretas que se requerirán para el desarrollo de las estrategias y elabora y eleva para aprobación del Comité de Finanzas los planes de contingencia eventualmente requeridos.

• El Comité de Riesgos es el responsable de vigilar el cumplimiento de las políticas que en materia de riesgos haya aprobado el Directorio, asegurando un enfoque integral de medición de los riesgos.

• Gerencia de Riesgos: elabora los reportes de seguimiento de políticas y límites para evaluación del Comité de Riesgos, realiza los cálculos de capital y pruebas de estrés y colabora con la Gerencia de Finanzas para la elaboración de los eventuales planes de contingencia.

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f) RIESGO DE TITULIZACIONES

Marco Conceptual

Las titulizaciones constituyen una fuente alternativa de financiación y un mecanismo para la transferencia de riesgos a terceros. Como contrapartida, las actividades de titulización generan nuevos riesgos, entre los que se incluyen: a) Riesgos de crédito, mercado, liquidez, concentración, legal y reputacional por las posiciones de titulización retenidas o invertidas, incluyendo -entre otras- a las facilidades de liquidez y mejoras crediticias otorgadas; y b) El riesgo de crédito de las exposiciones subyacentes a la titulización. La exposición a los riesgos de una titulización puede surgir, entre otros, de los siguientes conceptos: tenencia de títulos valores emitidos en el marco de la titulización, es decir, títulos de deuda y/o certificados de participación, tales como bonos de titulización de activos y bonos de titulización hipotecaria, mejoras crediticias, facilidades de liquidez, “swaps” de tasa de interés o de monedas y derivados de crédito.

Políticas

La gestión del riesgo de titulización debe enmarcarse en los siguientes lineamientos:

• Para la adecuada gestión de riesgos, al momento de la aprobación de nuevas operaciones o productos, se debe analizar y evaluar la totalidad de las posiciones de titulización (incluyendo a las que no están registradas en el estado de situación patrimonial, se encuentren o no contabilizadas en cuentas de orden), respetando los límites para minimizar las concentraciones y estimar las vinculaciones con otros riesgos asociados. A posteriori y, en forma continua, analizar los riesgos subyacentes, mediante herramientas cuali y cuantitativas, modelos de valuación y pruebas de estrés que permitan evaluarlos de un modo confiable.

• A tales efectos se debe considerar el valor de mercado de las posiciones de titulización retenidas y de aquellas que están siendo estructuradas, independientemente de cuál sea la probabilidad de que efectivamente sean titulizadas. Asimismo, como parte de las pruebas de estrés, se debe considerar escenarios que impidan titulizar dichos activos, Identificando los factores y los efectos potenciales sobre liquidez, ganancias y solvencia.

• En la medida que se requieran, los planes de contingencia, indicarán las posibles respuestas a las presiones, particularmente sobre fondeo y el capital, que pudieran surgir al reducirse el acceso a los mercados de titulización; así como las respuestas a cómo enfrentar las dificultades para valuar las posiciones potencialmente ilíquidas mantenidas en la cartera de negociación

Objetivos y Estrategias

Los objetivos particulares de las titulizaciones deben propender a:

Optimizar de la estructura financiera, con especial énfasis en la gestión de la liquidez Servir como herramienta de gestión del riesgo estructural de balance Transferir determinados riesgos Favorecer el crecimiento del negocio

Para ello, las técnicas y procedimientos elaborados y a elaborarse deben seguir las siguientes pautas estratégicas: • Gestión y diversificación del riesgo crediticio: las operaciones de titulización y la

posterior venta de los bonos al mercado, se orientarán principalmente a reducir las concentraciones de riesgo de crédito que se producen como consecuencia de la actividad

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comercial. La transferencia efectiva del riesgo llevada a cabo con estas operaciones, permitirá optimizar la exposición en riesgo de crédito y contribuir a la creación de valor.

• Obtención de liquidez: la titulización buscará movilizar el balance, transformando activos ilíquidos en líquidos y obtener financiación en los mercados mayoristas con su venta o utilización como colateral.

• Diversificación de las fuentes de financiación: otro objetivo, derivado de la obtención de liquidez, puede ser la diversificación de fuentes con las que se financia el Banco tanto en plazo como en productos.

Marco de Gestión

El Banco de Corrientes define un marco para la gestión, medición, control y mitigación del riesgo de titulizaciones, como parte de un proceso continuo e integrado. Para ello, resulta importante la actuación coordinada entre las áreas intervinientes cuyas funciones, responsabilidades y atribuciones se sintetizan seguidamente:

• El Directorio es responsable de definir y aprobar el marco adecuado, estableciendo políticas y procedimientos generales respecto de la forma en que los mismos serán gestionados.

• El Comité de Finanzas determina la estrategia de titulización desde el punto de vista de gestión estructural del balance, evalúa y aprueba las acciones que se requerirán para el desarrollo de la estrategia y la operatoria de titulización, evalúa los riesgos inherentes a la actividad de titulización con una visión integral, vigila el desempeño de las operaciones emitidas y, evalúa y aprueba los planes de contingencia elaborados.

• La Gerencia de Finanzas determina y propone las acciones que se requerirán para el desarrollo de la estrategia y la operatoria de titulización (para ello: realizará las interconsultas necesarias con otras áreas involucradas o a involucrarse), lleva adelante las acciones aprobadas y autorizadas. Elabora y eleva para aprobación del Comité de Finanzas los planes de contingencia eventualmente requeridos.

• El Comité de Riesgos es el responsable de vigilar el cumplimiento de las políticas que en materia de riesgos haya aprobado el Directorio, asegurando un enfoque integral de medición de los riesgos.

• Gerencia de Riesgos: elabora los reportes de seguimiento de políticas y límites para evaluación del Comité de Riesgos, realiza los cálculos de capital y pruebas de estrés y colabora con la Gerencia de Finanzas para la elaboración de los eventuales planes de contingencia.

• Resto de las áreas: brindan el soporte técnico para la registración, administración y, elaboración y difusión de las normas y procedimientos aplicables para esta operatoria.

g) RIESGO DE CONCENTRACIÓN

Marco Conceptual

Se entiende como concentración de riesgo, a las exposiciones o grupos de exposiciones con características similares (tales como corresponder al mismo deudor, contraparte o garante, área geográfica, sector económico o estar cubiertas con el mismo tipo de activo en garantía), con la posibilidad de generar:

a) Pérdidas, cuya significatividad (respecto de los resultados, el capital regulatorio, los activos o el nivel global de riesgo), es capaz de afectar la solidez del Banco o su capacidad para mantener las principales operaciones; o

b) Un cambio significativo en el perfil de riesgos de la Entidad. Las concentraciones de riesgo de crédito resultan de factores de riesgo comunes o correlacionados que, en períodos de estrés, pueden producir un efecto adverso sobre la solvencia de los deudores, contrapartes y/o garantes. Por ello, este riesgo está presente tanto en las

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exposiciones directas frente a los deudores y contrapartes como en las exposiciones frente a quienes brindan protección crediticia.

Los riesgos de concentración pueden producirse en los activos, los pasivos y/o en las partidas fuera de balance;

Entre las situaciones más comunes que pueden originar concentraciones de riesgo, se encuentran:

Exposiciones con un mismo deudor o contraparte o con un grupo de deudores y contrapartes vinculados;

Exposiciones en una misma región geográfica, industria o sector económico; Exposiciones crediticias indirectas originadas en la misma cobertura del riesgo crediticio, tales

como garantías y derivados crediticios obtenidos del mismo proveedor de protección crediticia.

Exposiciones fuera de balance -tales como líneas de liquidez, garantías otorgadas y otros compromisos- pactadas con la misma contraparte.

Las exposiciones en la cartera de negociación; Las fuentes de fondeo;

Políticas

La gestión de los riesgos de concentración debe enmarcarse en los siguientes lineamientos básicos:

El crédito otorgado por el Banco debe estar orientado a financiar la inversión, la producción, comercialización y consumo de los bienes y servicios requeridos tanto por la demanda interna como por la exportación.

La cartera del Banco debe propender a la diversificación por sectores económicos, regiones y atomización del riesgo entre los clientes o grupos económicos, a fin de evitar concentraciones en el riesgo crediticio.

Crear alternativas de financiamiento a la clientela dentro de estándares de calidad de cartera. Las proyecciones deben tener presente en todo momento la particular situación derivada de

ser Agente Financiero de la Provincia y la exigencia que ello implica; realizando los esfuerzos necesarios para establecer y mantener relaciones prudenciales para la provisión de liquidez con contrapartes habituales.

Evitar, en lo posible, la generación de dependencia concentrada en determinadas fuentes de financiamiento, ya sea por su consideración individual o por la modalidad operativa

Mantener Informado a la Alta Gerencia y al Directorio acerca de la evolución y perspectivas de los distintos sectores económicos, a fin que dicho órgano pueda determinar los sectores objetivo, no objetivo y el grado de concentración de riesgo en los mismos con que debe operar el Banco.

Objetivos y Estrategias

Los objetivos en materia de concentración, alineados con las políticas precedentes deben propender a:

Gestión y diversificación del riesgo crediticio

Diversificación de las fuentes de financiación

Las técnicas y procedimientos elaborados y a elaborarse para la gestión del riesgo de concentración, deben considerar las siguientes pautas estratégicas particulares, además de las generales determinadas para la Gestión del riesgo de Crédito y de Titulización:

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• Analizar las concentraciones de riesgo a nivel individual y consolidado, ya que una concentración de riesgo en una sucursal gestionada inadecuadamente puede afectar la viabilidad de la misma, aunque la concentración sea poco significativa a nivel consolidado.

• Considerar las concentraciones, medidas respecto de un único factor de riesgo o de un conjunto de factores de riesgo altamente correlacionados, de manera integral en la evaluación de la exposición global al riesgo.

• Considerar las concentraciones tradicionales así como las que se originan en las correlaciones entre los distintos factores de riesgo.

• Identificar y comprender las concentraciones de riesgos presentes a través de distintas líneas de negocio y tipos de exposición, tales como las que producen los deudores con alto nivel de riesgo de crédito, los fideicomisos y las operaciones en curso de ser fideicomitidas y las actividades vinculadas a la cartera de negociación.

• Evaluar el riesgo de concentración mediante diversas técnicas, las que deben incluir, siempre que corresponda, la realización de pruebas de estrés a nivel de toda la organización y de las líneas de negocio y el uso de modelos de medición de capital.

• Medir las concentraciones con el objeto de identificar y responder ante los cambios que puedan producirse en las condiciones del mercado y que pudieran afectar negativamente los resultados de la entidad y su nivel de capitalización, tales como la acumulación potencial de concentraciones bajo condiciones de mercado estresadas.

• Establecer límites internos a las posiciones de concentración a los cuales está expuesta.

• Poner periódicamente en conocimiento de la Alta Gerencia y del Directorio, las exposiciones al riesgo de concentración.

Marco de Gestión

El Banco de Corrientes cuenta con un marco para la gestión del riesgo de concentración que incluye estrategia, políticas, prácticas, procedimientos y estructura organizacional suficiente y adecuada para la administración de este riesgo; dicho marco involucra a la estructura cuyas funciones y competencias, se describen en forma sintética, a continuación:

• El Directorio es responsable de definir y aprobar el marco adecuado, estableciendo políticas y procedimientos generales respecto de la forma en que los mismos serán gestionados.

• El Comité de Créditos determina la estrategia para la aplicación de las políticas vinculadas a las concentraciones de crédito y evalúa los riesgos inherentes de cada operatoria importante con una visión integral; vigila el desarrollo de las operaciones instrumentadas y, realiza el seguimiento de la morosidad de la cartera.

• Las Gerencias de Crédito y de Canales elaboran y ponen a consideración del Comité de Créditos las nuevas líneas y/o productos, así como sus volúmenes, destinatarios y límites. Por cada operatoria que deba considerarse en Comité, se incluyen (entre otras consideraciones), sus relaciones con los límites establecidos.

• El Departamento de Riesgo Crediticio analiza previamente las operaciones importantes (conforme a los límites y previsiones indicadas en el Manual de Riesgo Crediticio) y, elabora su informe para análisis y evaluación del Comité de Créditos

• El Comité de Finanzas evalúa y aprueba las acciones que se requerirán para el desarrollo de la estrategia en materia de fondeo, analiza los riesgos inherentes a cada una de las fuentes de financiación y, evalúa y aprueba los eventuales planes de contingencia elaborados.

• La Gerencia de Finanzas determina y propone las acciones que se requerirán para el desarrollo de la estrategia en materia de fondeo. Elabora y eleva para aprobación del Comité de Finanzas los planes de contingencia eventualmente requeridos. Lleva adelante las acciones aprobadas y autorizadas.

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• El Comité de Riesgos es el responsable de vigilar el cumplimiento de las políticas que en materia de riesgos haya aprobado el Directorio, asegurando un enfoque integral de medición de los riesgos.

• Gerencia de Riesgos: elabora los reportes de seguimiento de políticas y límites para evaluación del Comité de Riesgos, realiza los cálculos de capital y pruebas de estrés y colabora con la Gerencia de Finanzas para la elaboración de los eventuales planes de contingencia.

• Resto de las áreas: brindan el soporte técnico para la registración, administración y, difusión de las normas y procedimientos aplicables.