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Manual de Capacitación Express Escuela Bíblica de Vacaciones

Abril 2007 - Revisión Septiembre 2010 y Agosto 2011

Guatemala, C.A.

Introducción

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Manual de Capacitación Express Escuela Bíblica de Vacaciones

Introducción En el mundo actual, los niños y las niñas tienen acceso a la información como nunca. Nuestros niños van creciendo con valores morales distintos, y el propósito de sus vidas parece cambiar de los valores cristianos a los materialistas, donde se valora a cada uno por las cosas que tiene. En nuestras iglesias se ha olvidado que el futuro está en la enseñanza a los niños pequeños, ya que creciendo no se apartarán de su fe (Proverbios 22.6). Creo firmemente que esto es verdad, si preparamos a nuestros niños hoy, podrán enfrentar el futuro con los principios y valores bíblicos que hemos recibido. Recuerdo con mucha gratitud a mis maestros y pastores que han dejado huella, les agradezco y es mi deseo continuar con la sana doctrina en nuestra iglesia. Necesitamos volver a las sendas antiguas para conocer nuestro papel como una iglesia pujante, victoriosa y pionera en la educación cristiana. Nuestra misión (no imposible): Hechos 1.8. Nuestro Maestro nos ha dejado el modelo de crecimiento más efectivo del mundo: hacer discípulos. Sin distinción de raza, color, forma e idioma, sin discriminar a ninguno y haciendo buen uso de la Palabra. Nosotros sembraremos la semilla, Dios se encarga del resto. En este curso reforzaremos nuestra CONVICCIÓN, nuestras CREENCIAS, nuestros VALORES y PRINCIPIOS CRISTIANOS, y por supuesto, daremos paso a la Escuela Bíblica que abrirá los corazones de los niños y niñas al incondicional Dios de amor.

Byron Rivas M. Byron Rivas Maestro Escuela Dominical

Manual de Capacitación Escuela Bíblica de Vacaciones

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Índice

Introducción..................................................................................................................... 1

Índice............................................................................................................................... 2

Sesión I – Pedagogía .................................................................................................... 3

1. Comprensión del alumno ............................................................................................ 3

2. Puntos de interés ........................................................................................................ 5

3. Servicio enfocado a Niños........................................................................................... 6

Sesión II – Vida Cristiana .............................................................................................. 7

4. Alabanza y adoración para niños ................................................................................ 8

5. Construyendo una nueva Iglesia ............................................................................... 10

6. Preparación del Maestro ........................................................................................... 11

7. Enseñando la Biblia a los niños ................................................................................ 13

Sesión III - Práctica ..................................................................................................... 16

8. Comprendiendo y aplicando la Biblia ........................................................................ 16

9. ¡Es hora de la clase!.................................................................................................. 18

10. De grupo a equipo de trabajo.................................................................................. 19

11. Dinámicas al aire libre / en clase............................................................................. 20

12. Las reglas del juego ................................................................................................ 22


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Sesión I – Pedagogía El significado de la palabra Pedagogía está relacionado con el arte o ciencia de enseñar. La palabra tiene su origen en el griego antiguo paidagogos; de las raíces "paidos" que es niño y "gogía" que es llevar o conducir. Se usaba para referirse al trabajo del esclavo, pedagogo, que era la persona encargada de llevar y traer a los chicos de la escuela a la casa, es decir, llevar, conducir o guiar al niño. En la actualidad se considera a la pedagogía como el conjunto de conocimientos que se ocupan de la educación; toma en cuenta al ser humano y su relación con sus semejantes y su entorno; se define como la ciencia que tiene por objeto la educación del ser humano.

1. Comprensión del alumno

Características de las diferentes edades Cada niño es diferente. Cada niño tiene su propio paso al desarrollarse, y su propio temperamento. Por eso no es bueno generalizar demasiado, y no debemos pensar que el mismo "plan" educativo se aplique a todos los niños. Bebés (hasta los 2 años): "CONFIANZA" La confianza es lo primero que un bebé aprende. Cuando necesita algo, llora, y viene papá o mamá para ayudarle: le da comida cuando tiene hambre, lo cubre cuando tiene frío, lo consuela cuando está triste, etc. Así aprende el bebé a confiar en que alguien lo cuida y se preocupa por él. ¿Existe un estado "inocente" de los niños? Algunas personas (incluso cristianos) dicen que los bebés son inocentes y no necesitan la Salvación. Pero ¿qué dice la Biblia? Lee Salmo 51:5. - Fuimos concebidos en p________________. (Este verso no dice que el acto de la concepción fuera pecado, pero que desde el inicio de nuestra vida estamos en el estado de pecado, o sea, separados de Dios.) Lee Romanos 3:23. "Por cuanto t___________ pecaron". Lee Marcos 16:15. "Predicad el Evangelio a t___________ c_____________." Entonces, ¿qué sucede con un bebé pequeño si muere?

- La Biblia no da ninguna respuesta directa. Dios no permite conocer todos sus secretos. Pero confiamos en que Dios es justo, y la Biblia nos da señales que Dios tiene un camino para perdonar y salvar a los pequeños (Lucas 10:21).

- El requisito para ser salvo es la FE (CONFIANZA). Vimos que la confianza es lo primero que un bebé aprende. Si un bebé puede confiar en su papá y su mamá, ¿por qué no puede también confiar en Jesucristo?


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De 2 a 5 años: "DESCUBRE" A los dos años, un niño ya ha aprendido a hablar, a caminar, a manejar objetos con sus manos, y mucho más. Ahora quiere descubrir todo lo que puede hacer con estas habilidades. El niño descubre su propia identidad. El niño empieza a darse cuenta: "Yo no soy papá, no soy mamá; yo soy yo. Entonces, si mi mamá me dice algo, ¡yo puedo decir No! Tengo mi propia voluntad." Esta fase del "No" puede ser un tiempo agotador para los padres. Pero es en esta etapa que el niño tiene que aprender la obediencia: someter su propia voluntad a la autoridad de sus padres. El niño descubre su medio ambiente. Esta es la edad de los experimentos: el niño quiere subir a las bancas y mesas, abrir todas las puertas, jugar con todo lo que encuentra. ¡Estas actividades son importantes para su desarrollo! En todos estos descubrimientos, el niño ejercita su inteligencia y su cuerpo. De 6 a 8 anos: "PERSEVERANCIA" Sus fuerzas crecen, pero necesitan ser animados. Los niños de esta edad tienen más fuerzas. Tenemos que animar a los niños de esta edad a terminar los trabajos que empezaron (por ejemplo un dibujo). Actividades en grupo Ahora pueden aprender a integrarse en un grupo y tener consideración por los demás. Podemos enseñarles juegos en grupo y hacer concursos entre grupos. No es bueno poner a un niño solo ante la clase, ni hacer concursos individuales. En lo espiritual: Buscan ejemplos, "héroes". Les gusta mucho los juegos relacionados con personajes de cuentos o películas ("¡Juguemos al Superman!"), y quieren ser como estos personajes. Si se trata de los "ejemplos" de este mundo, es mala influencia. Pero podemos presentarles buenos héroes: los hombres de Dios en la Biblia. Entonces los niños van a querer ser valientes como Gedeón, confiados como David, o buenos como el Señor Jesús. De 9 a 12 años: "AMIGOS" - "LA REALIDAD" Quieren pertenecer a un grupo. Ahora, los amigos se vuelven muy importantes. Muchos niños encuentran su identidad en algún grupo, es "de moda" hacer lo que hacen los amigos (la manera de vestir y peinarse). Buscan la separación entre varones y mujeres. Muchos niños de esta edad no quieren hacer amistad con el sexo opuesto. Esto no debe preocuparnos: es la edad cuando los varones aprenden a hacer "cosas de varones", y las mujeres a hacer "cosas de mujeres". El desafío como entrenamiento de Dios Lee 1 Samuel 17:34-35. - David se enfrentó con un o_______ y un l_______. David tenía unos once o doce años cuando esto pasó. Fue en estos enfrentamientos que David aprendió que Dios estaba con él. David necesitaba esta preparación para enfrentarse más tarde con Goliat. Nuestros niños también tienen "osos" y "leones" en su camino; estos problemas son oportunidades para aprender a vencer, confiando en Dios. ¡EN ESTA EDAD SE HACEN LAS BASES DE LOS PRINCIPIOS Y VALORES QUE VAN A DETERMINAR LA VIDA DEL ADULTO!


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2. Puntos de interés

Ganar la atención de los niños Al preparar nuestra lección bíblica, tenemos que hacerla más interesante para ganar la atención de los niños. Si pudiéramos medir la atención de los niños en una escala, el máximo sería lo que deseamos: "Atención al maestro". ¿Cuál sería lo contrario? _____________________ Si pusiste la palabra "desatención", estás equivocado. ¡Los niños casi siempre están atentos! El problema es que no están atentos a nosotros, sino a cualquier otra cosa. Por ejemplo, un niño está muy atento al cierre de su pantalón, que se ha trabado; otro escucha atentamente un chiste que le cuenta su compañero. Entonces, el contrario (inquietud, distracción...) podemos llamarlo "atención a otras cosas". Hay una competencia entre lo que nosotros hacemos como maestro, y las muchas cosas alrededor que también llaman la atención de los niños. ¡Tenemos que ganar la competencia! Cuando llegan a la clase, están en un "nivel mediano" de atención. Por un lado, están con la expectativa de que algo interesante va a suceder. Pero por el otro lado, están todavía pensando en el juego que jugaban, o en su tarea de la escuela, o algo que sucedió en casa. Por eso, el inicio es muy importante. Si hacemos algo interesante y creativo al inicio, la atención de los niños va a subir al máximo. Entonces soy libre para enseñar y contar mi historia, y los niños me van a escuchar. Pero poco a poco va a disminuir esta atención. Los niños empezarán a voltear sus cabezas, a moverse, a jugar, a hablar entre ellos. Si sigo enseñando igual, va a llegar un momento donde ya no puedo controlar la clase. (Las llamadas a la atención no van a cambiar la situación, porque ya perdí la atención de los niños.) - Esto no es una maldad de los niños, sino algo natural: Nadie puede concentrarse por largo tiempo. Suponemos que hasta ahora he usado dibujos para ilustrar mi historia. Pero ahora pongo mis dibujos a un lado, llamo adelante a un niño y le digo: "Tú vas a ser Pedro", y a otro: "Tú vas a ser Juan", y a otro: "Tú vas a ser Jesús." Estos niños van a ser los actores que representan mi historia. ¡En seguida, todos los niños van a estar atentos nuevamente!

¿Cuánto tiempo puede un niño escuchar de manera concentrada? - Esto es diferente en cada niño. Depende de su temperamento, de su entorno familiar y su educación. Pero mucho depende de su edad. Como promedio, podemos decir que un niño puede concentrarse un minuto por año de edad: Un niño de cinco años, solo cinco minutos. Un niño de diez años, diez minutos. Un adolescente de quince años, quince minutos.

Para reflexionar: Si tengo que enseñar a niños de 5 años durante una hora y quiero cambiar de actividad cada 5 minutos, ¿cuántas diferentes actividades tengo que preparar? ____________ Si, debo preparar 12 diferentes actividades. Estos son algunos ejemplos de actividades variadas que podemos usar en la enseñanza: Cantar; contar la historia con dibujos; contar dramatizando o con títeres; hacer preguntas de repaso; memorizar un versículo; dialogar acerca de una aplicación práctica; un juego; un trabajo manual. ¡Cada una de estas actividades debe relacionarse con la meta de la lección!


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3. Servicio enfocado a Niños Lee Mateo 18:5. El Señor dice aquí que de la misma manera como tratamos a un niño, así tratamos a ______________. Lee Mateo 18:6. Según lo que dice el Señor, uno de los peores pecados es hacer ______________ a un n________. Lee Mateo 18:10. Tampoco debemos m______________________ a un n________. En estos tres versos podemos ver cuan importantes son los niños para el Señor. a. Recibir a los niños con amor. Para nosotros, como maestros, es importante expresar nuestro amor hacia los niños. Si no tienes amor hacia los niños (un amor que no tienes no lo podrás expresar) primero necesitas pedirle al Señor que te lo dé.

Contacto visual Debemos mirar a los niños, especialmente mientras enseñamos. Esto no es solo una forma de ganar su atención; es también una forma de decirles: "Tú eres importante para mí."

Contacto físico Podemos mostrar cariño a los niños, por ejemplo saludarlos con un abrazo, o mientras leen o hacen su trabajo manual, ponerles la mano sobre sus hombros. Sin embargo, esto tiene sus límites. Los niños tienen también su "privacidad" y algunos niños no quieren ser tocados. Atención concentrada A veces los niños quieren hacernos preguntas o contarnos algo; entonces debemos tomar tiempo para escucharles. Debemos mostrarle al niño que él o ella es en este momento la persona más importante en el mundo para mí. Aunque sea solo medio minuto debo dar mi atención completa al niño que quiere conversar conmigo. Animar Cuando los niños hacen algo bueno, hay que reconocerlo. También tenemos que animar a los niños que se sienten mal, o que sienten que uno no les toma en cuenta: "Inténtalo otra vez, ¡tú puedes!" Establecer reglas claras Los niños necesitan saber qué cosas se permiten y qué cosas son prohibidas en la reunión. Por ejemplo: ¿Es permitido salir al baño durante la historia bíblica? - ¿Es permitido comer pan en la clase? - ¿Es permitido traer juguetes a la clase? Para reflexionar: Piensa en la última lección que enseñaste y evalúate a ti mismo. ¿En qué medida has mostrado amor a los niños? Contacto visual __ poco __ regular __ mucho Contacto físico __ poco __ regular __ mucho Atención concentrada __ poco __ regular __ mucho Animar __ poco __ regular __ mucho Estructura y reglas: __ poco __ regular __ mucho Mantener un ambiente agradable: __ poco __ regular __ mucho


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b) No hacer tropezar a los niños. Vuelve a leer Mateo 18:6-10. Esta es una de las palabras más duras de nuestro Señor, y se refiere al trato con los niños. Tan importantes son los niños para él, que aquí nos da una advertencia muy seria. Dar mal ejemplo Si les enseño a los niños que no deben mentir, y después yo mismo digo algo que no es verdad, les hago tropezar. Los niños perderán confianza en mí y pueden perder también la confianza en Dios, porque yo como maestro soy un representante de Dios. Enseñanza equivocada, exageraciones, etc. A veces exageramos una historia para hacerla más interesante: "Un día, el Señor Jesús alimentó a un millón de personas." Algún día, los niños van a leerlo en su propia Biblia y van a descubrir que les he enseñado mal. Injusticia (preferir a ciertos niños, ser parcial, etc.) Tenemos una tendencia natural de preferir a ciertos niños antes que otros, por ejemplo, hay un niño con una cara bonita que siempre nos sonríe, y si este niño molesta, no decimos nada. Quizás tenemos a otro niño con una cara fea y si este niño se comporta mal, enseguida lo sancionamos. No reconocer errores No somos perfectos, y de vez en cuando nos puede suceder que hagamos una de estas cosas que causan tropiezo a un niño. Pero entonces debemos buscar al niño ofendido lo más pronto posible y pedirle perdón. No vamos a perder nuestra autoridad si pedimos perdón a un niño. Al contrario, nos va a respetar más por ser sinceros y admitir nuestro error.

Sesión II – Vida Cristiana

Para que nosotros podamos vivir la vida cristiana debemos tener a Jesucristo viviendo dentro. El es tu vida, tú eres exclusivamente Suyo y puedes vivir la vida de El solo por Él. El apóstol Pablo explica, "Con Cristo he sido juntamente crucificado; y ya no vivo yo, sino que Cristo vive en mí. Lo que ahora vivo en la carne, lo vivo por la fe en el Hijo de Dios, quien me amó y se entregó a sí mismo por mí." (Gálatas 2:20).

Tu habitas en Cristo mientras El se comunica contigo a través de Su palabra y mientras respondes a El por medio de la oración. Haz un hábito el arrodillarte cuando El te habla a través de las Escrituras. Ora diariamente para que El pueda guiarte a donde El. Entonces cuando Satanás toque a tu puerta deja que Jesús conteste. "Mayor es El que está en ti, que el que está en el mundo" (1 Juan 4:4).

Ya que Cristo mora en ti, tu estas lleno del Espíritu Santo. Deja que El viva su vida en ti. Cuando El libera Su vida a través de ti, tú eres cambiado en el proceso.


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4. Alabanza y adoración para niños Oración y alabanza con niños ¿Sabías que Dios también utiliza ayudas visuales? Una ayuda visual magnífica es el Templo en Jerusalén. Todo el pueblo de Israel tenía que viajar a Jerusalén, tres veces al año, para presentarse ante Dios en el Templo. Hoy ya no necesitamos viajar a Jerusalén. Pero en lo espiritual, este Templo sigue dándonos un ejemplo de cómo podemos acercarnos a Dios.

La entrada: Alabanza En Salmo 100:4 leemos sobre la entrada al Templo: Debemos entrar por sus puertas con ____________________ y por sus atrios con ________________. La entrada es lo primero. Esto nos sugiere que para acercarnos a Dios, la mejor forma de empezar es con alabanza. Para ti, ¿qué significa alabanza? Alabar significa "expresar gratitud" o "decir algo bueno acerca de

alguien". Alabar a Dios significa decirle cuan bueno es él , y darle gracias por lo que él hizo . Sin esta actitud, nuestras canciones no son alabanza. Al escoger coros para un tiempo de alabanza, tenemos que escoger coros que realmente expresen esta gratitud al Señor. Por ejemplo, "Jonás no hizo caso ..." puede ser un muy buen coro para una lección sobre Jonás; pero no es una alabanza; es un coro que cuenta una historia.

El atrio: Limpieza y peticiones personales Ahora entramos al atrio del Templo: un patio o espacio amplio alrededor de la casa del templo. Allí hay dos cosas importantes: una fuente de agua, donde los sacerdotes tenían que limpiarse (Éxodo 30:17-21), y un altar donde ofrecían sacrificios quemados. Esto nos habla de la limpieza que necesitamos antes de entrar a la presencia de Dios. Hebreos 12:1-2 menciona dos cosas que tenemos que dejar atrás: los pesos (cargas, preocupaciones, peticiones personales), y los pecados. ¿Por qué nosotros no tenemos que sacrificar animales?

Jesucristo es nuestro sacrificio; él murió una vez para siempre para perdonar nuestros pecados (Hebr.9:11-12). Para nosotros, el altar significa el sacrificio completo de Jesucristo. Lo que necesitamos hacer, es confesar nuestros pecados (reconocer y pedir perdón), y confiar que Jesucristo nos 1limpia (1 Juan 1:8-9).

El Lugar Santo: Adoración y Escuchar a Dios

Al entrar a la casa del Templo, llegamos a un ambiente que se llama el Lugar Santo. Aquí se encuentra otro altar más pequeño, donde se quemaba incienso. El incienso era un símbolo de la adoración (Salmo 141:2, Apoc.5:8). La adoración significa entrega; rendirse completamente al Señor. Como el incienso sube a la presencia de Dios como olor agradable y se consume enteramente, así deberíamos nosotros "consumirnos" en el servicio del Señor.

Adoración significa también reconocer la soberanía de Dios y honrarle como el que es - no es importante si él nos ha bendecido en este momento o no.


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Hay dos otros objetos en el Lugar Santo: Un candelero de oro con siete lámparas de aceite, y una mesa con doce panes. Los panes simbolizan la Palabra de Dios que nos alimenta (Mateo 4:4). El candelero nos habla del Espíritu Santo que nos ilumina. (El aceite es un símbolo del Espíritu Santo.) Estos dos objetos nos hacen recordar las dos formas como Dios habla

con nosotros: por medio de Su Palabra, y por la iluminación de Su Espíritu. La oración debe ser una comunicación en ambos sentidos: nosotros hablamos y Dios escucha, pero también Dios quiere hablarnos y debemos escuchar lo que Dios quiere decirnos. (Juan 10:27, 15:15).

El Lugar Santísimo: Intercesión Detrás del Lugar Santo, separado por una gran cortina o "velo", hay otro ambiente, el Lugar Santísimo. Allí se guardaba el arca del pacto con las tablas de la ley, y las figuras de los querubines que simbolizan la misma presencia de Dios. Ni siquiera los sacerdotes podían entrar a ese lugar; sino solamente el sumo sacerdote y sólo una vez al año. En este lugar pedía perdón por los pecados de todo el pueblo. Esto se llama intercesión, y es uno de los privilegios más grandes que tenemos hoy como cristianos: podemos entrar a la misma presencia de Dios para interceder por otro El borde del vestido del Sumo Sacerdote tenía campanillas que sonaban todo el tiempo que él estaba ministrando (Ex.28:33-35), además, se amarraba una soga en su pie cuando entraba al Lugar Santísimo. Si había algo inmundo o pecaminoso en el sumo sacerdote, él moría ante la presencia de Dios. Si esto sucedía, las campanillas ya no sonaban, y la única manera de sacarlo era jalarlo por la soga. No debemos tomar a la ligera el entrar a la presencia de Dios. No podemos enseñar a los niños algo que no practicamos. No podemos enseñarles a orar si nosotros no oramos. Cada día debemos tener un tiempo de comunión con el Señor; no como una "costumbre", sino una relación personal con él. Honestamente, ¿cómo calificarías tu vida de oración personal durante las últimas tres semanas? (Marca la respuesta) � intensiva � como de costumbre � no estuve orando Lo que el niño necesita para orar: El niño necesita la seguridad que puede confiar en las otras personas que están presentes, si piensa que otros niños se van a burlar de su manera de expresarse o tiene miedo a la crítica del maestro por las palabras que utiliza, no va a orar. El niño necesita conocer a Dios como Padre, de manera personal y tener la seguridad que puede confiar en Dios. En la oración, el tiempo de concentración es corto, porque el niño no puede ver a Dios con quien habla. Para dirigir tiempos de oración, también necesitamos preparar ayudas visuales y métodos creativos (enseguida veremos unos ejemplos.) - ¡En ninguna parte de la Biblia dice que es necesario cerrar los ojos para orar!


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¡Nunca...! • Nunca orar mucho tiempo o en un lenguaje difícil. • Como regla, cuando dirigimos una oración con niños, no tardar más de un minuto. • Nunca obligar a un niño que ore. La oración debe ser una experiencia agradable para

los niños; algo que nazca en su propio corazón. • Nunca seguir con la oración cuando los niños están distraídos o hacen bulla. En esta

situación es mejor decir "Amén" y terminar la oración. Ideas prácticas para la oración con niños Alabanza: Coros con mímicas; aplauso para Dios; dibujar banderas con

mensajes de alabanza; anotar razones para dar gracias en un papel grande o pizarra; “entregar flores a Dios”; hacer un dibujo para Dios.

Confesión de pecados: Depositar una piedra al pie de una cruz; traer agua, jabón y toalla para lavarse las manos; anotar su pecado o carga en un papelito y quemarlo.

Peticiones personales: Anotar en una avioneta de papel o una flecha y “dispararla al cielo”. Escuchar a Dios: ¿Qué cosas escuchas con tus oídos? Vendar los ojos de unos

niños y después llamarlos por su nombre. Adorar: Adorar en diferentes posiciones (parado, arrodillado, postrado,

etc.); coros de adoración con mímicas; sugerir oraciones de muy pocas palabras: “Dios, tú eres…” (el Rey, el Creador, todopoderoso, mi mejor amigo, etc.).

Interceder: Orar por un país o lugar lejano, mostrar fotos o dibujos, mapas. Poner un mapa al piso y “conquistar el país” con los pies (Jos. 1:3).

5. Construyendo una nueva Iglesia Cuando hablamos de “construir una nueva iglesia” significa que deseamos ver un crecimiento integral en nuestra iglesia, transformando la cultura actual, hacia el modelo de Jesucristo. (Hebreos 12:14). Dios dará el crecimiento. Respetar a todos por igual No importa la raza, no importa el color, la agrupación política o el estatus financiero... todos somos iguales ante los ojos de Dios. Lea Juan, capítulo 13, versículos 13 al 15, y llevando el principio aún más lejos, no debemos juzgar ni murmurar unos contra otros (Mateo 7:1), al contrario debemos crear en la nueva cultura, un ambiente de comprensión, compañerismo y apoyo. Somos consiervos unos de otros, y debemos de cesar las murmuraciones, iras, contiendas y disensiones (peleas de mercado) ya que estas son obras del enemigo A. Cultura de oración Ejercitarse en la oración permite acercarse más a Dios cada día. ¿Cuánto tiempo está dedicando a la oración? Sume las horas que dedica a la semana para hablar con Dios, y divida ese número dentro de 168. Luego complete el cuadro siguiente:


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Horas Porcentaje Horas de la semana 168 100% Dormir 56 33%

Comer 21 13%

Ver televisión 21 13%

Estudiar 15 9%

Orar % B. Cultura de Estudio Bíblico Proverbios 1:1-7 nos da una definición clara del propósito del estudio bíblico. La Palabra de Dios es útil para enseñar, para redargüir, para corregir y para instruir en justicia (2 Timoteo 3:16). Nuevamente la pregunta para cada grupo es... ¿cuánto tiempo es necesario para estudiar el Libro de texto que daremos a nuestros alumnos? Algunos tienen educación especial en la Biblia; otros quizá no tenemos la oportunidad. Pero he podido comprobar que Dios da su iluminación a través del Espíritu Santo, para que comprendamos Su palabra. Él nos ha dejado al Espíritu Santo, para que nos instruya. 6. Preparación del Maestro La palabra "capacitación" viene de la palabra "capaz". Una capacitación debe lograr que los participantes sean capaces de hacer algo, y de hacerlo bien. En esta capacitación, los participantes deben salir capaces de preparar una lección bíblica para niños, y de enseñarla. ¡Entonces tienen que practicarlo! Nuestra motivación como obreros Al examinarnos a nosotros mismos, podemos encontrar tres clases de motivos por qué queremos trabajar con niños:

� Motivos humanos o emocionales: Esta clase de motivos tiene que ver con lo que tú sientes, humanamente. Es bueno tener esta motivación. Normalmente, Dios nos da tareas que en el fondo nos gustan, y que vemos que son necesarias, y que El nos ha dado la habilidad para realizarlas. ¡Esto no significa que siempre será fácil! Pero si no te gustan los niños, si no logras tener un buen contacto con ellos, y si lo haces por obligación, entonces debes buscar otra tarea en la iglesia donde te sientas mejor.

� Motivos egoístas:

Estos son los motivos que nadie dice en voz alta: pero cuando examinamos nuestro corazón con sinceridad, podemos encontrar también algunos motivos egoístas para estar en este


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ministerio. Puede pensar: "A mí no me dan importancia en la iglesia. Pero los niños sí me van a admirar, porque soy más fuerte que ellos, yo sé más que ellos, etc." - O también: "Nadie me ama, nadie me da cariño, pero los niños sí me van a dar cariño." Otros piensan: "Este trabajo con los niños es una entrada fácil para llegar al liderazgo. Podré avanzar a ser líder de adolescentes y de jóvenes, y hasta ser líder de la iglesia." ¡Este es un pensamiento muy equivocado! En la realidad, no hay responsabilidad más "importante" que enseñar a los niños. Si lo hacemos para alcanzar algo diferente, entonces nos estamos aprovechando del ministerio, en vez de servir.

¿Qué dice Dios acerca de esta clase de motivos? Mateo 6:33: Debemos buscar primero el _________________________. Gálatas 1:10: Debemos hacer la obra, no para agradar a los _____________, sino para agradar a ____________. ¿Qué hago si encuentro estos motivos egoístas en mí mismo? Confiésalos a Dios, reconoce que es pecado, y arrepiéntete. Dios te puede usar en el ministerio, pero solo si tu actitud cambia (1 Juan 1:7-9). Motivos espirituales: Los motivos humanos son buenos, pero no son suficientes. Este ministerio no es para ti si no tienes también alguna motivación espiritual. Mencionaremos dos motivos espirituales importantes: "Quiero alegrar el corazón de Dios." La primera persona que debe alegrarse de tu enseñanza no son los niños, ni tus líderes, ni tú mismo. La primera persona que debe alegrarse de tu enseñanza, es Dios mismo. Habrá momentos cuando te preparas de la mejor manera que puedes, pero los niños no quieren recibir tu enseñanza, o dejan de asistir. Entonces podemos sentirnos desanimados y frustrados. Pero si te has preparado en oración ante el Señor y has hecho tus preparaciones como para el Señor y no para los hombres, entonces has cumplido. "Lo hago porque Dios me llamó a hacerlo." Cada cristiano está bajo el llamado general de ser testigo del Señor (Marcos 16:15-18, Hechos 1:8). Lo que varía de una persona a otra, es la forma particular como cumplimos este llamado. Pide a Dios que él examine tu corazón: ¿Cuáles son tus motivos verdaderos para trabajar con niños? ¿Sabes que Dios te ha llamado a esta obra? ¿Tienes todavía motivos egoístas? (No abandones la capacitación si no estás seguro. Las prácticas que realizarás, serán una oportunidad donde Dios puede confirmar tu llamado.)


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La meta de la enseñanza

Dios tiene un gran regalo espiritual preparado para cada niño y nuestra meta debe ser que los niños reciban este regalo de Dios, por medio de nuestra enseñanza. Las actividades y métodos que utilizamos, son como el carro que transporta el regalo; pero no son el regalo mismo. Debemos esperar que Dios cambie las vidas de los niños, y debemos orar para que esto suceda. Para completar el dibujo, tenemos que llenar los espacios que quedan: El remitente del paquete es Dios; los destinatarios son los niños. ¡El mensajero eres tú! Escribe en esa línea tu propio nombre. El camino por el cual viaja este carrito, se llama la amistad. Cuando somos amigos verdaderos y sinceros de los niños, más fácilmente recibirán nuestra enseñanza. 7. Enseñando la Biblia a los niños Preparar y contar una historia bíblica Empieza a tiempo con las preparaciones. Si te toca enseñar el día domingo, debes empezar a prepararte desde el lunes anterior, o sea, una semana antes. Lee la historia detenidamente en tu propia Biblia y responde a las siguientes preguntas: ¿Quién(es)? ¿Quiénes son las personas que aparecen en la historia? ¿Cuándo? ¿En qué tiempo sucedió? Examinamos las circunstancias históricas.

¿En qué época sucedió la historia? (ej.: durante el reinado de David; durante la vida de Jesús en la tierra; después de la resurrección de Jesús; etc.) También podemos fijarnos en la hora del día: ¿fue de mañana, en la tarde, en la noche?

¿Dónde? Necesitamos saber cómo se llama el lugar donde sucedió la historia, y cómo se veía aquel lugar. ¿Era una ciudad? ¿un pueblo pequeño? ¿un


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lugar en el campo? - ¿Las personas se encontraban en una casa, en la calle, en el campo?

¿Qué sucedió? Haremos un breve resumen de la historia: pocas palabras, pero ordenadamente y mencionando todos los sucesos importantes.

Aunque estés utilizando algún material ya preparado, necesitas leer y preparar la historia desde tu propia Biblia. - ¿Por qué? La Palabra de Dios es inspirada, pero la narración que encuentras en tu material no es inspirada. Por tanto, esta narración quizás omite unos detalles importantes; añade detalles que no están en la Biblia; o es inexacta en algunas partes. Necesitas conocer la historia tal como está en la Biblia. El autor del material que utilizas, no conoce a los niños que tú enseñas. Por tanto, este autor no sabe si tus alumnos comprenderán exactamente aquellas expresiones que él utiliza. Tendrás que adaptar la narración al entendimiento d e tus alumnos.

Ejemplo: Lucas 15:11-24 (Parábola del Hijo Pródigo, sin la última parte) ¿Quiénes? - el padre, el hijo mayor, el hijo menor, el hacendado (v.15), los siervos del padre (v.17 y 22), Jesús (él es quien cuenta la historia, v.11). ¿Cuándo? - En los tiempos de Jesús. ¿Dónde? - En la casa del padre (en Israel); y en una provincia lejana. Podemos saber con seguridad que esta provincia lejana no se encontraba en Israel, sino en el extranjero: Los israelitas no crían marranos, era el trabajo más humillante que un israelita se podía imaginar. Esto tiene un significado espiritual: Israel era en aquel tiempo el único Pueblo de Dios, y cualquiera que buscaba a Dios tenía que ir a Israel. Salir de la tierra de Israel significaba a la vez alejarse de Dios. ¿Qué sucedió?

- El hijo menor pide su herencia. - El padre reparte sus bienes. - El hijo menor se va lejos. - Malgasta su dinero. - Viene una gran hambre. - Tiene que pastorear chanchos. - Se arrepiente y regresa donde su padre. - El padre le perdona y hace fiesta.

Deja que Dios te hable a ti mismo por medio de Su Palabra. ¿Dios te dice aquí algo que debes hacer? Probablemente tendrás una oportunidad, en esta misma semana, para ponerlo en práctica. ¿Dios te promete algo, o te enseña algo sobre cómo es El? Entonces fíjate durante esta semana si experimentas en tu propia vida que Dios es así como El dice. Cuando el Señor obra en tu propia vida, entonces tendrás un testimonio personal que podrás compartir con los niños. Así los niños verán que la Palabra de Dios realmente transforma nuestras vidas.


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Después, fija una META para tu lección. Nuestra meta para la lección sobre el Hijo Pródigo podría ser:

- Que los niños se arrepientan de lo malo que hicieron, y que entiendan que Dios nos perdona cuando nos arrepentimos.

Otras posibilidades serían:

- Que los niños entiendan que cuando pecamos, tenemos que sufrir las consecuencias. - Que aquellos niños que todavía no se entregaron al Señor, se arrepientan y se

entreguen a Él. A partir de aquí, elaboras un bosquejo, es decir una guía para presentar la lección. Nota: Todo lo que hicimos hasta ahora, sirve para que nosotros mismos conozcamos mejor la historia que vamos a enseñar. Ahora empezaremos a preparar cómo contarla a los niños. Creatividad: Desarrolla la lección para los niños. Una buena historia tiene un inicio, un desarrollo, una cumbre, y un final:

Inicio interesante (sin descubrir todo el contenido): p.ej. una pregunta; mostrar un objeto; empezar en medio de la historia; dramatizar... Desarrollo: Sucesos inesperados, conflictos y problemas aumentan la tensión. Enfatizar y enseñar la meta de la lección en relación con la historia. Cumbre: el "núcleo" de la historia: La tensión alcanza su máximo y después se soluciona. Final: ¡corto! Lo que decides hacer lo anotas en un bosquejo, tal como lo contarás a los niños. Busca expresiones que los niños comprendan. Cuando un misionero viaja a Japón para alcanzar a los japoneses con el Evangelio, no podría predicarles en español. Tendría que aprender el idioma japonés. Igualmente, para alcanzar a los niños con el Evangelio, tenemos que aprender el idioma de los niños. ¡Ellos no usan las mismas palabras que los adultos! Tenemos que examinar nuestra historia y explicar cada palabra que podría ser difícil de entender para los niños. Ejemplo: Buscamos expresiones más sencillas para las siguientes palabras de nuestra historia:

"Bienes": "lo que le pertenece"; (mejor): "dinero, vacas, ovejas, muebles, etc." "vivir perdidamente": "hacer cosas malas"; (mejor): "emborracharse, hablar groserías, vivir sin pensar en Dios, etc." "Malgastar": "gastar el dinero en cosas malas; comprarse mucha ropa lujosa o un carro lujoso; invitar a todos para tomar; gastar el dinero en juegos; etc." "Algarrobas": una verdura parecida a las habas, pero no tan rica. "Jornalero": "siervo", "empleado" (que encuentra trabajo solamente de día en día).

Muchas palabras se explican mejor con un ejemplo que con una definición.


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Sesión III - Práctica 8. Comprendiendo y aplicando la Biblia Aprende la historia de memoria. No toda la historia literalmente, pero el resumen que hiciste. Debes saber de memoria cada punto de la historia y como sigue en su orden. Para esto nos sirve el resumen. (No podríamos memorizar un capítulo entero de la Biblia, pero sí un resumen de siete o diez puntos.) Podemos usar un bosquejo escrito al enseñar; pero no debemos depender de ello. En la lección: Ten la Biblia en tu mano. Aunque tengamos nuestro bosquejo de la historia, en la lección la contamos con la Biblia en la mano. Por dos razones:

- Podemos necesitar la Biblia como referencia para algunos detalles que se nos pueden escapar o que los niños preguntan.

- Los niños deben saber que no contamos un cuento inventado, sino una historia de la Palabra de Dios.

Hasta aquí tenemos preparada la historia en sí. Lo que nos falta todavía, son las ayudas visuales y métodos creativos. Ahora aplicaremos lo que hemos estudiado. Ejercicio en clase: A) Lee Lucas 19:1-10 y anota aquí tus respuestas a las cuatro preguntas: ¿Quién(es)? -------------------------------------------------------------------------------- ¿Cuándo? -------------------------------------------------------------------------------- ¿Dónde? -------------------------------------------------------------------------------- Inicio (esto se escribe de último): -------------------------------------------------------------------------------- -------------------------------------------------------------------------------- -------------------------------------------------------------------------------- ¿Qué sucedió? 1. ________________________________ 2. ________________________________ 3. ________________________________ 4. ________________________________


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Relato de la historia: -------------------------------------------------------------------------------- -------------------------------------------------------------------------------- -------------------------------------------------------------------------------- -------------------------------------------------------------------------------- -------------------------------------------------------------------------------- -------------------------------------------------------------------------------- -------------------------------------------------------------------------------- -------------------------------------------------------------------------------- -------------------------------------------------------------------------------- -------------------------------------------------------------------------------- -------------------------------------------------------------------------------- -------------------------------------------------------------------------------- -------------------------------------------------------------------------------- Final (atractivo y emocionante): -------------------------------------------------------------------------------- -------------------------------------------------------------------------------- Después de mencionar a las personas que aparecen en la historia, puedes tomar un tiempo para caracterizar a cada una de las personas principales: ¿Cómo era Zaqueo? (su apariencia; su carácter; su manera de actuar); ¿Jesús? ¿la multitud? - Estas características nos pueden ayudar a describir o representar a cada persona de manera adecuada cuando contamos la historia. PREGUNTA ADICIONAL DE REPASO: ¿Cuáles son las cuatro preguntas que nos hacemos al analizar una historia Bíblica? ¿Q_________? ¿C__________? ¿D__________? ¿Q__________? TAREA: Elabora un bosquejo, de la manera como lo hicimos en el ejercicio anterior, para la próxima historia bíblica que te toca enseñar.


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9. ¡Es hora de la clase! Bienvenida Es bueno pensar con anticipación cómo dar la bienvenida a los niños mientras llegan: ¿Un maestro se para afuera y saluda a cada niño que llega? ¿Cantamos un coro de bienvenida? ¿Hacemos un juego mientras están llegando los niños? ¿o alguna dinámica que incentiva a los niños a saludarse unos a otros? Es importante que el maestro llegue antes que los niños. Los niños son el "espejo" del maestro: Si el maestro llega tarde, los niños van a llegar más tarde todavía. Algunos pueden desanimarse y ya no venir nunca, si han venido algunas veces y el maestro no estaba allí. Pero si el maestro es cumplido y puntual, los niños también van a aprender a serlo. Alabanza y oración Aquí anotamos: - qué coros vamos a cantar - qué actividades realizaremos para guiar a los niños en la oración - de qué forma les demostraremos que Dios es digno de alabar - qué ayudas visuales utilizaremos en este tiempo. Historia Bíblica Resumen de la historia (junto con el inicio interesante y el final), con explicaciones de las expresiones difíciles, y marcando donde podemos llegar a nuestra meta (hacer una pequeña aplicación a la vida de los niños). - Texto(s) bíblico(s) - Análisis de la historia:

¿Quiénes? ¿Cuándo? ¿Dónde?

- Partes de la lección: Actividad / Método Ubicación Bienvenida Alabanza y oración Inicio interesante; Historia Bíblica, Enseñanza

Profundizar la enseñanza Aquí no queremos decir que sigamos hablando más. Al contrario, ahora son los niños los que tienen que ser activos. Aquí entran actividades como las siguientes:

- Hacer un concurso con preguntas de repaso - Memorizar un versículo bíblico - Que los niños vuelvan a representar la historia en forma de un drama - Dibujar, pintar, o hacer un trabajo manual.

Cada una de estas actividades debe relacionarse con la enseñanza que los niños recibieron. De esta manera están repasando toda la historia, y esto profundiza la experiencia en sus


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corazones. Por ejemplo, mientras los niños dibujan o pintan a Pedro sacando muchos pescados del agua, se recuerdan como el maestro les contó la historia de la pesca milagrosa. Aplicación para la vida personal: La aplicación no es necesariamente al final; puede ser antes o en medio de la profundización. Si hacemos un dibujo o trabajo manual con los niños, entonces es mejor poner esta actividad al final de la lección y tener la aplicación antes. Despedida Aquí también hay diferentes formas, y debemos pensar con anticipación en una buena manera de despedir a los niños: ¿Despedir a cada niño personalmente, dándole la mano? ¿Terminar con una oración unida? ¿o cantar un coro de despedida? Nunca es bueno que el maestro dé la espalda a los niños, ni que haya niños sentados detrás del maestro: el maestro no puede controlarlos, y los niños no pueden ver lo que el maestro explica. También hay que fijarse en la luz (ventanas o luz artificial): La luz debe venir desde detrás de los niños. Cuando tienen que mirar contra la luz, no pueden ver bien las ayudas visuales; en este caso, el maestro tendrá que cambiar la ubicación de los niños. 10. De grupo a equipo de trabajo

Un grupo de personas es el que se reúne en un lugar común, en un momento específico. Es así como “grupo” le podemos llamar a los que vamos en el autobús, los que compramos en el supermercado, o los que van al estadio. Un grupo no tiene metas comunes, se encuentra por casualidad en un mismo lugar, al mismo tiempo.

Cuando hablamos de “equipo” de trabajo, estamos pensando en un grupo de personas que tienen un objetivo que cumplir. Por ejemplo, equipo de fútbol debe anotar más goles, de lo contrario perderá el partido. Todos persiguen este objetivo, y ninguno sobresale a menos que todos ganen. También podemos pensar en equipo cuando hablamos de las hormigas, tienen tareas específicas cada una, para lograr una meta común: sobrevivir. ¿En nuestra iglesia, los maestros pertenecen a un grupo o a un equipo de trabajo? ¿Cada uno vela por su clase y por su material, o nos unimos para enfrentar enfermedades comunes y resolvemos juntos los retos que presentan los niños? Reflejamos que somos un equipo cuando... ... atendemos las necesidades de la iglesia en conjunto. ... enfrentamos a los traviesos y los confrontamos bajo las mismas reglas. ... compartimos nuestra vida, además de sólo venir a la iglesia. Dios nos creó diferentes a cada uno, con diferentes dones y talentos. Así podemos complementarnos unos a otros. Por eso tenemos que trabajar juntos, en equipo. (Para profundizar este principio, lee 1 Corintios 12:12-30).


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Reunirse regularmente Todo el equipo de maestros debe reunirse con regularidad (como mínimo una vez por mes; pero mejor con más frecuencia). En estas reuniones, los maestros pueden compartir sus experiencias, intercambiar ideas, y hablar sobre las dificultades que tienen. Es importante que los maestros se apoyen mutuamente y que oren unos por otros. También se deben hacer los acuerdos en estas reuniones, y se pueden planificar eventos especiales (paseos, campamentos, etc.) Cada uno tiene su parte Cada uno tiene que cumplir con su parte:

- Ser cumplido con su tarea asignada. Si un maestro no es cumplido, todo el equipo sufre y los niños también.

- Comunicarse con los demás (en caso de cambios, etc.). A veces, un maestro puede tener un contratiempo: un examen, un viaje, etc. Pero casi todas estas circunstancias son previsibles.

- Es una experiencia muy desagradable para maestros y niños, si un maestro tiene que improvisar en el último momento una lección porque no vino la persona que debía enseñar. Estas clases improvisadas normalmente no salen bien.

- Dar prioridad a la obra con niños. El ministerio con niños debe cumplir con la visión general de la iglesia, y la iglesia debe tomar en cuenta la visión y las necesidades del ministerio con niños. Para que esto suceda, se necesita una buena comunicación. Continuidad y crecimiento de la obra Los maestros tienen que entrenar. Para adquirir la experiencia necesaria, los maestros deben permanecer mucho tiempo en su cargo. Si el maestro deja su ministerio antes de haber capacitado a otros maestros nuevos, toda su clase se destruye. Por eso, un maestro debe ponerse como meta permanecer en su clase durante cinco años como mínimo, y reclutar a nuevos maestros durante este tiempo. ¡Una iglesia nunca tiene demasiados maestros! Se sugieren tres maestros por clase, en el caso que uno de ellos no puede venir. Cuando hay más maestros, se puede abrir un grupo nuevo de niños en un lugar donde no hay ningún grupo; o pueden ayudar a levantar una nueva Escuela Dominical en una iglesia que no tiene ninguna. De esta manera podemos extender el Reino de Dios. 11. Dinámicas al aire libre / en clase Es recomendable para cualquier dinámica que deseas emplear en tu clase, que primero la practiques con algunos amigos o familiares, y veas cuáles son las dificultades del juego, si estás dando las instrucciones adecuadas (que los niños las comprendan), y si necesitas algunos materiales adicionales (lazos, pelotas, globos, etc).


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Al aire libre – ¡que vuele tu creatividad! Molinos de viento Con dos o más grupos de 8 o 10 alumnos, formados en círculo cada grupo. Se toman todos de las manos, y los numeras dentro del círculo. Los números impares deben inclinarse sobre sus pies hacia delante, los números impares deben inclinarse sobre sus pies hacia atrás. Esto permitirá que por la resistencia, cada grupo forme un molino o una estrella (uno hacia adentro del círculo y otro hacia afuera). Gana el grupo que logre resistir el mayor tiempo posible sin romper el círculo.

Matado Clásico juego donde dos grupos de cinco integrantes intentan “eliminar” al grupo contrario, al lanzar una pelota o balón. El jugador que sea alcanzado por el balón, deberá sentarse y dejar a su equipo con menor número de elementos. El equipo ganador será el que permanezca con jugadores “vivos” (este puede utilizarse para una lección de perseverancia, de no caer en tentación, de trabajar en equipo). Estaciones Prepara de 4 a 8 estaciones (puntos dentro del campo o edificio) donde coloques una lista de tareas, y cada equipo formado deba buscar en las hojas, realizar la tarea y pasar a la siguiente estación. Si estás al campo libre, procura mezclar el ejercicio físico con el conocimiento bíblico (apto para cualquier aplicación). Por ejemplo: Estación 1 – escriba un listado de los libros de la Biblia; Estación 2 – de 10 vueltas en el árbol grande; Estación 3 – repita el Salmo 23 con la música de un coro; etc. Gana el equipo donde todos sus elementos realicen lo que se solicita (no el que termine primero). Rally Similar al anterior, con la diferencia que se realiza ejercicio físico únicamente, y gana el equipo que recorra cada obstáculo en el menor tiempo posible (una condicionante más puede ser que no deje ningún elemento atrás).

Preguntas y respuestas Separa a todos los alumnos de la clase en un área grande, con altoparlante o altavoz, lanza las preguntas y el que responda primero, ganará un punto para su equipo. Es como un examen oral, y puedes hacer algunas peticiones “extraordinarias” (como un zapato de color azul, caminar con las manos, etc.)

En clase

Esgrima bíblico / buscando perlas (google) Con la Biblia cerrada y en alto, indica una cita o pasaje bíblico; el alumno que la encuentra de primero, se pone de pie y la lee en alta voz. Procura tener un asistente para asignar correctamente los puntos al buscador más veloz. Cuestionarios y exámenes No hay mejor herramienta para asignar calificaciones que los exámenes. Realiza cuestionarios acordes a las lecciones que has dado para premiar a los alumnos que sí han participado y hacen el esfuerzo de completar sus hojas de trabajo.


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Crucigramas En los cuestionarios puedes incluir crucigramas o acertijos, diagramas para ser completados o áreas de dibujo. Esto permitirá desarrollar la creatividad de tus alumnos en los temas bíblicos que expones, y darles la oportunidad de aplicarlos en su vida diaria.

Dramas De acuerdo a la edad de tus alumnos, puedes asignarles personajes bíblicos, y que ellos representen al personaje del relato. Si son pequeños, será difícil que aprendan el papel del personaje, por lo que puedes narrar la historia y ellos seguirte con mímicas. ¡Con la práctica podrás presentar un drama en el devocional general de la iglesia! Proyectos Asigna tareas de investigación, trabajos manuales, resúmenes de películas o programas de televisión, para que tus alumnos se involucren en el trabajo de la iglesia. Por ejemplo, pueden hacer un ministerio de títeres para niños, o repartir los boletines, o dar la bienvenida en la entrada del templo. Si tienes algún proyecto fuera de las instalaciones, asegúrate de pedir permiso a los padres, y que éstos firmen una boleta con su autorización. 12. Las reglas del juego 1. Lo que se debe y no se debe hacer en la iglesia

¿Se debe jugar fútbol en el salón de clase? ¿Se deben leer revistas cómicas o ver películas de acción con los niños? Entonces instalemos gramilla y porterías en el templo, y escuchemos comediantes en lugar de predicadores. El juego en la vida del niño ocupa el tercer lugar en importancia (luego de comer y dormir). Esto no significa que le permitamos hacer “de todo” en la iglesia. Lo que el niño aprende jugando, años después lo pone en práctica; y es nuestro deseo que aprendan a comportarse delante de Dios en Su Santo templo.

Lo que debemos hacer en la Iglesia

- Compartir (Hechos 2:44) - Memorizar (Salmos 119:11) - Contar las historias verídicas de la vida de Jesús (Juan 21:25, Hechos 1:1) - Integrarnos como hermanos, convivir unos con otros y ayudarnos unos a otros - Jugar limpio, con reglas claras (Lucas 6:37) - Adorar a Dios (Isaías 56:7) - Ofrendar (Marcos 12:44)

Lo que NO debemos hacer en la Iglesia

- Campeonatos de fútbol (para eso hay estadios y canchas de papi-futbol) - Comprar y vender (si hay ofrendas, no hay necesidad de ventas) - Rifas y venta de boletos (Mateo 21:12) - Propaganda política para puestos públicos (dentro y fuera de la iglesia) - Burlarse de la Palabra de Dios o de Jesucristo (chistes, chismes, fábulas, herejías) - Herir al hermano, ofender al hermano, abusar de la buena voluntad de los hermanos - Insultar a los niños, ofender su fe y sus creencias (Mateo 18:6)


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Debemos demostrar con nuestra vida la pasión que sentimos por Dios y por Su Palabra, y guiarlos en los primeros pasos de su vida cristiana. Conforme a nuestro ejemplo, ellos se comportarán en el futuro.

2. Estableciendo las reglas del juego en mi clase Aquí hay una forma práctica de hacer una lista de reglas para la clase. Lo mejor es que las ideas vengan de los propios niños, y establecer desde el principio (primera clase o inicio del año) lo que se espera y no se espera que hagan. Para esta actividad, prepara un pliego de papel periódico, cartulina, o pega 4 hojas bond para hacer un lienzo grande. Luego, con marcadores de color, escribe el título “LAS REGLAS DEL JUEGO”, y los numerales 1 al 10 en forma vertical (ver el ejemplo siguiente).

LAS REGLAS DEL JUEGO

1. 2. 3. 4. 5. 6. 7. 8. 9. 10.

Luego, con marcador de distinto color, escribe los “10 mandamientos” para la clase; pregunta a los niños qué les gustaría y qué no les gustaría hacer. Te sorprenderás de las ideas de ellos, y de las propuestas que hacen. Por ejemplo, ellos van a decir “masticar chicle”, entonces anotamos: “NO masticar chicle”. Pueden decir también “poner apodos”, entonces anotamos, “llamar a todos por su nombre”. Incluye algunas cosas que deben hacer, por ejemplo “Participar”, “Prestar atención”, “Preguntar”, etc. Dios te ayudará para dirigir la mente y corazones de los niños de tu clase. Ejemplo:

LAS REGLAS DEL JUEGO

1. Trae tu Biblia 2. Poner atención 3. No salirse de la clase 4. No masticar chicle 5. ¡Preguntar! 6. Llamar a todos por su nombre 7. Participar en los juegos 8. 9. 10.

Como última recomendación, toma tiempo para anotar los datos personales de tus alumnos: nombre, dirección y teléfono; y si te es posible visitarlos o llamarlos. Ellos nunca olvidarán que su maestro o maestra de Escuela Dominical llegó a visitarlos. Que Dios te bendiga y fortalezca en esta gran misión, educar a los niños y niñas que serán parte del futuro de la Iglesia.


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e-Bibliografía Capacitación para maestros - Hijos del Altísimo http://www.altisimo.net Capacitación para Maestros de Escuela Dominical Viviendo la vida Cristiana http://www.abideinchrist.org/selahes/jan30.html La Biblia Citas incluidas de la versión Reina-Valera revisión 1960 Material adaptado y dedicado a las personas interes adas en preservar la educación cristiana en su iglesia local.

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