Los planes de

estudio y

La formación de

valores morales.

Valeria MarroquínEunice Juárez

Instituto Laurens, A.CLicenciatura en Educación Bilingüe

• A lo largo de la historia de la educación en México, se han efectuado numerosas modificaciones a los planes de estudio de los cinco niveles de enseñanza: preescolar, primaria, secundaria, media superior y normal.

• La prudencia hace varias recomendaciones antes de modificar los planes; 1) ¿Se realizó una evaluación satisfactoria de los planes que se desea modificar? 2) ¿Se preparó a los maestros suficientemente antes de implantar los planes?

• En la tarea de reformar los planes de estudio, se debe distinguir aspectos: 1) supresión total o parcial de asignaturas; 2) adición de nuevas asignaturas o

nuevos contenidos a las antiguas; 3) tiempo suficiente para probar el nuevo plan de estudios.

• Parece que las decisiones de cambios en los planes de estudio no se han tenido en cuenta ninguna de estas

recomendaciones.

• Hepner (1991,) hace las siguientes juiciosas consideraciones a propósito de los cambios de planes de estudio: 1) el cambio de plan de estudios es tarea costosa en términos de los maestros; 2) la inteligencia magisterial colectiva suele ser menor que la inteligencia media de los maestros; 3) el razonamiento y la objetividad cuentan poco en los cambios de planes, pues se imponen el poder, la disciplina y la supervivencia.

• El mismo autor admite que el avance de las disciplinas obliga a reformar los planes de estudio, tarea que puede efectuarse por adiciones o supresiones a los ya existentes.

La formación de valores morales

• Art. 3º promulgado en 1993, “la educación que imparta el Estado tenderá a desarrollar armónicamente todas las facultades del ser humano.”

• La educación integral incluye no solo la información e instrucción, sino también la comunicación de valores morales; la educación se reducirá al desarrollo de la inteligencia.

• Al hablar de valores, debe calificarse de cuáles se trata , se divide en varias clases: valores, materiales, intelectuales, morales, religiosos y estéticos.

• Los valores impregnan toda la vida humana. Cualquier discusión sobre el comportamiento de un hombre, la justicia de una causa y el sazón de un alimento alude necesariamente al reino de los valores. Son tan importantes en la vida humana que suelen convertirse en normas y pasan de allí a ser motivos. También según los psicólogos, constituyen uno de los elementos que integran la personalidad. Se relacionan con las motivaciones, deseos, impulsos y los sentimientos y contribuyen a la realización personal de cada individuo.

• Los filósofos dieron al valor otra dimensión y lo convirtieron en concepto fundamental de la ética. También suelen señalar varias características de los valores: estables, rasgos asimilados por cada persona; polares , a cada valor positivo se contrapone uno negativo, por ejemplo: lo bello se contrapone a lo feo, lo sano a lo enfermo, etc.

• Los valores suelen ser producto de la experiencia; en su generación intervienen la inteligencia, los afectos y emociones y la voluntad.

En tiempo de Plutarco Elías Calles se adopto un código de moral para las primarias, obra del doctor Araizas. El código consta de once postulados de cada

uno de derivan ciertos propósitos que el niño debe realizar.

El primero postulado dice: “los niños que ejercen mayor dominio sobre si mismos pueden servir mejor a su país”. Los otros postulados se refieren a la salud, la bondad, la confianza en si mismo, el cumplimiento del deber, el ser digno de

confianza, la veracidad, el empeño de hacer bien las cosas, la cooperación y la lealtad.

José M. Puig Casauranc, secretario de Educación Publica, estableció un ingenioso paralelismo entre el código de moralidad de la SEP y el decálogo de la biblia para

hacer ver como los postulados del código encierran preceptos de los mandamientos o los expresan, excepto los relativos a Dios.

• Durante el gobierno de Lázaro Cárdenas, Lizandro Calderón escribió sobre la educación moral. Asienta como valor positivo todo lo que tiende a dar plenitud. La dicha, el poder, la belleza, la bondad, con valores positivos. La plenitud, el poder, la belleza, etcétera, proporciona los valores vitales de nobleza de alma, quien los posea puede vivir bien moralmente. La labor del educador es promoverlos en la vida del educando.

Durante el gobierno de Adolfo López Mateos hubo otro proyecto para comunicar valores a los niños mexicanos. La cartilla moral de Alfonso Reyes se uso para el educando adulto, pero también era accesible a los niños. La cartilla no solo presentaba cuestiones morales, si no también extendía a nociones de sociología, antropología, política o educación cívica, higiene y urbanidad

Reyes establece que la moral nos obliga a una serie de respetos, y que estos a su vez están contenidos dentro de otros.

• En el sexenio de Carlos Salinas de Gortari, el entonces secretario de educación, Ernesto Cedillo Ponce de León, trato de introducir de nuevo la cartilla moral. La educación moral era de especial importancia en el acuerdo nacional para la modernización de la educación básica, tanto que la SEP iba a emplear la cartilla de Reyes, junto con otras obras de consulta. Sin embargo el grupo que estudiaba el asunto decidió rechazarla.