los maradona por beto casella

6

Upload: la-tele-que-miramos

Post on 21-Feb-2016

234 views

Category:

Documents


0 download

DESCRIPTION

Revista gente Año 1995

TRANSCRIPT

Page 1: Los Maradona por Beto Casella
Page 2: Los Maradona por Beto Casella
Page 3: Los Maradona por Beto Casella

"Cuando pasan algunas horas sinvernos, no aguantamos.Inconscientemente buscamos unaexcusa para estar juntos. "(Diego Maradona)

Claudia y Diego

Y a se cumplieron dieciocho añosdesde aquel primer beso robadoen una sociedad de fomento deVilla del Parque.En el medio, ya se sabe, hay mu-

cha gloria, algunas trampas del destino,una cuenta bancaria de varios millones dedólares, una vida ni siquiera soñada en lostiempos de Devoto y Fiorito, y dos hijasque se llaman Dalma y Giannina. Hay, ab-soluta y definitivamente, una historia deamor digna del cine. Algún productor de-bería pensado ...

Claudia Villafañe tiene un credo:"Siempre estuve y vaya estar al lado deDiego. En las buenas y en las malas. Sim-plemente, porque es mi marido. Y vayaacompañarlo en todo lo que haga".

Un credo que se parece mucho al deMaradona y que afirmó más todavíacuando los problemas lo cercaron: "Loúnico que me importa profundamente es elamor de Claudia y de las nenas, que son mialegría".

Para muchos, Claudia Villafañe y DiegoMaradona son agua y fuego. Diferentes,pero muy parecidos. Una familia unidaque puede ataviar-se con la mejor ymás cara de las ro-pas de Versace,con las más senci-llas y compradasen cualquier tien-da, y hasta poner-se unas pantuflascon cara de osito.Que pueden co-mer caviar ("No sepreocupen, mis nietos van a comer caviar";les dijo Maradona a unos periodistas pre-ocupados por su economía), pero disfru-tan a fondo el más simple de los platos.Que cargan a Diego padre, a Tata (la ma-dre) ya los Villafañe cada vez que pueden.y que no titubean en maquear si ven a Pa-lito y Evangelina enamorándose por tele-visión en Mi primera novia.

Sus amigos cuentan que el idilio no setermina cuando se apagan los flashes dela prensa.

Alguien que conoce muy bien su inti-midad dice que ''parecen novios. El viveregalándole discos de Montaner, de LuisMiguel o de Arjona, y ella vive regalándoleropa. Están todo el día dándose piquitos.Se abrazan, se tocan, se dicen cosas al oí-do... y hay una cosa que no cambian pornada: meterse en el hidromasaje, repleto dejabón, junto con las nenas. En ese momen-to se puede venir el mundo abajo ..."

La pasión, parece, no se apaga así nomás. El jura ante sus amigos que, de tanto

96

intentar la llegada delhijo varón, "última-mente estoy vacunan-do a la Bruja más de loque se merece':

Por las dudas, los dossaben perfectamente(porque alguien se lo di-jo) que, para encargar esevarón, el óvulo debe ferti-lizarse cuando la luna -siestá en cuarto creciente,mejor- ocupe signos posi-tivos. Los de fuego y aire:Aries, Géminis, Leo, Libra,Sagitario y Acuario, segúnlas Tablas del Año Astral.

Si se les pregunta, los doscoinciden en que la relaciónestá en su mejor momento.

Reconocen, eso sí, que casidos décadas juntos no transcu-rrieron en vano: que, a fuerza demeter la pata, terminaron en-contrándoles la vuelta a las cosas:conocerse y comprenderse a par-tir de un mínimo gesto.

Los dos saben qué cosas prefiere o de-testa el otro.

Maradona, por ejemplo, sabe que aClaudia no le gusta manejar con muchotránsito. Resultado: cada vez que puede,lleva a sus hijas al colegio de Belgrano, y alas ocho en punto de la mañana.

Si por él fuera, ni loco elegiría para sushijas el régimen de doble escolaridad (lemolesta que casi nunca almuercen en sucasa), pero respeta la decisión de Claudia,que optó por ese tipo de educación.

'\

ESPOSOS AMANTES"Ella es unamadraza", diceDiego. En lasfiestas, en lacancha (Claudia loacompaña) o conDalma y Giannina,lo comparten lodo."Claudia disfrutaen las buenas.y no exigeen las malas. "

Page 4: Los Maradona por Beto Casella

o a tomar algo con sus amigos:un berretín -dicen- que lequedó desde su época joven yaun cuando las duras concen-traciones no se lo permitían.

Si se trata de encargar pelí-culas en el video club, ella sabeque él prefiere las de Van Dam-me, Bruce Willis y Gerard De-pardieu. A la hora de comer noolvida que el número 10 sólotoma gaseosas diet y (a veces)un té de boldo después delpostre.

y cuando llega su cumplea-ños no olvida el rito: la fiestatiene que arrancar con el temaMi enfermedad cantado porFabiana Cintilo.

Dalma y Giannina están denovias, pero la circunstanciano los preocupa demasiado. Elnovio de Dalma se llama Eric,y el de Giannina es -aunqueparezca el invento de un astutojefe de prensa- el hijo de Ricar-do Darín. Con el que compar-te ... la misma salita del jardínde infantes.

¿Peleas?Sí. Como en las me-jores familias, según el dichopopular.

La más fuerte, la mástormentosa, ocupóvarias páginas en losdiarios porque Mara-dona se borró durante

varios días y se instaló juntocon su cuñado en el apart hotelAspen-Suites, en pleno centrode Buenos Aires.

El mutis duró cinco días.Se habló de una internación,

de un tratamiento adelgazanteen una clínica, de cuanto quie-re y puede la imaginación po-pular.

Lo único cierto es que, des-pués de esa desaparición, ella yél "se pelearon feo", como re-cuerdan sus íntimos. Acotanque la macana fue de Marado-na, y que ella -aunque en esos

días no dio la cara- echaba chispas. Tan-to, que algunos amigos apostaron a que lacosa no tenía retorno. Que había caído eltelón.

Sin embargo, hubo reconciliación. Porteléfono y desde la habitación 921 delapart a la casa de los Maradona. Cuentanque hablaron más de una hora, que des-pués él pidió hablar con las hijas, y que esemismo día levantó campamento y volvió asu casa.

Luego de ese encontronazo hubo una'97

CUANDO 18 AÑOS NOSON NADA. "A pesar delos años que llevamosjuntos, nuestra pasiónes la misma del primer

día", confiesa Diego.

Algunos dicen que el doble turno es to-do un tema y que hasta suscita peleas. Pe-ro -por ahora- Claudia consigue salirsecon la suya.

El sabe que -como buena ama de casa-el reino de ella es la cocina. Por eso le hi-zo instalar un enorme televisor al costadode la alacena. Un televisor que está todoel día encendido ...

Claudia acepta -y hasta pone su mejorcara- que a su marido se le ocurra, cual-quier día y a cualquier hora, salir a bailar

Page 5: Los Maradona por Beto Casella

Claudia y Oiego

especie de luna de miel. Por primera vezse separaron por unos días de Dalma y deGiannina y viajaron a la Costa Azul conGuillermo Cóppola y su novia, Soma.

El retorno fue eufórico y triunfal.Como siempre, volvieron con una vali-

ja repleta de ropa con la etiqueta Versace,una marca que los enloquece. Tanto, quelos hermanos del célebre creador italianoviajan muy seguido a Buenos Aires, consu equipaje repleto de prendas, para quelos Maradona elijan.

Oato: una camisa Versace no bajade los 1.000 dólares. Otro dato:en los últimos tiempos, los dostomaron la costumbre de ves-tirse con ropa idéntica: la mis-

ma remera, los mismos jeans, la mismacampera de cuero, como si la simbiosismarido-mujer se trasladara también alguardarropa.

Claudia, además, le encarga modelos aEIsa Serrano un par de veces al año. Sudebilidad: la ropa negra. La debilidad desu marido: la ropa colorinche.

El área de Dalma y Giannina merece uncapítulo aparte: cada una tiene dos pla-cards repletos de ropa, desde joggings yjeans hasta sacones de zorro o de visón.Además, el play room que les armó su pa-dre en la mítica casa de Villa Devoto se98

tiene un gesto público de ese tipo. Concámaras cerca o no, Maradona jura que"sin ella no sería nada". Que ella fue, es yserá la mujer de su vida. La única capazde esperarlo todo lo que haga falta, de es-cucharlo en silencio, de contenerlo. Y ladefine como una sombra imprescindible.Así: "Sé que cuando me pasa algo malo,ella sufre igualo más que yo. Porque quizáses más consciente de lo que me pasa. En losmomentos buenos, ella disfruta, aplaude,se divierte, esfeliz. Pero en la mala no exigeni reprocha. Es una madraza. Ha sufridohorrores por las cosas que me pasaron, yaunque es de llanto fácil, jamás dejó caeruna lágrima delante de las nenas. De nochele encanta hacerlas dormir. Las acompaña

a su cuarto, y reciéndespués se dedica anosotros. A pesar delos años que hace queestamos juntos, nues-tra pasión es la mis-ma que la del pri-mer día. Cuandopasan unas horassin vernos, ya noaguantamos. Todolo que programamos-o los planes quecambiamos de gol-pe- no es otra cosaque una excusa paraestar juntos".

SI ESTO NO ESAMOR ... "Parecennovios", dicen losamigos queconocen bien suintimidad.

parece a la mejorde las jugueterías:Barbies gigantes,casas de plásticocon capacidadpara jugar aden-tro con sus ami-gas (servicio de téincluido), juegosde mesa, osos depeluche y cientosde muñecas consus vestuarioscompletos y has-ta con sus mue-

. bles. En la puertade uno de los pla-cards hay una car-ta: la escribióClaudia, se llama A mi papá, y las hijas selas leen al padre cada noche antes de acos-tarse.

Ella y él pasan juntos más tiempo delque se supone y a pesar de los frecuentescompromisos de Maradona. Además, noes un secreto que -frente a las cámaras olos grabadores, y aunque el tema central

.sea el fútbol o cualquier otra cuestión- élelogia a Claudia con cuanto adjetivo en-cuentra. En cambio, son muy pocos losque saben que ella llora cada vez que él

Pasaron casi.die-ciocho años desdeaquel primer besoen Villa del Parque.

Con gloria o sinella, en la pobreza oen la riqueza, en sa-lud o enfermedad,bajo luces o envuel-tos en sombras,aprenden juntos ymaduran juntos.Todo cambia o na-da cambia, pero eseamor parece inalte-rable.

Si dicen -o pien-san en silencio--que

cada uno es capaz de dar la vida por elotro, no mienten.

Yeso está más allá de la ropa de Versa-ce, del caviar, de los contratos, de los re-portajes y hasta de las pantuflas con carade osito.

Que por ahí andan, en algún rincón dela casa.

por: Beto Casellainformes: Rebeca Peiró y Guillermina d'André

fotos: Archivo Atlántida

Page 6: Los Maradona por Beto Casella

::J'" r~~ ID-o. .::::::: --t-tu~CD CD-CD..c CDeCD3 .o'_.., etu3 CDoCJ) 3•cr-o --

. (Q ..,CJ) ID-oo 3~•oo O3 en