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1 9 5 8 - 2 0 0 8AÑOS
Liderando el camino de la docencia y la investigación al servicio de la salud.
w w w . c e m i c . e d u . a r
CENTRO DE EDUCACIÓN MÉDICA E INVESTIGACIONES CLÍNICAS
“NORBERTO QUIRNO”
l Centro de Educación Médica e Investigaciones Clínicas “Dr. Norberto Quirno” ha visualizado la conmemoración
de su cincuentenario como una oportunidad para reafirmar sus objetivos fundacionales. Esta publicación describe
el pasado, lo cual es esencial para poder construir el futuro.
Según el decir de un ex presidente, el doctor Norberto Quirno fue un creador. El creador, generalmente, hace que
las cosas ocurran, aun sin conciencia del valor y del significado de los hechos que se van desencadenando. Para ello,
Quirno contó con una de las figuras más brillantes de la investigación del siglo pasado, el doctor Eduardo Braun
Menéndez. Y también con un grupo de eximios colaboradores clínicos y docentes.
No podemos dejar de expresar, en esta introducción, el recuerdo, afecto y profundo respeto por todos los que
hoy no están presentes. La mayoría de ellos trabajaron hasta los últimos días de sus vidas en la Institución.
Docencia e investigación para una alta calidad de atención médica no fue una mera declaración de principios; es
ejercida, cada día, por todos los miembros del CEMIC en los distintos niveles y funciones.
También tuvo lugar, de manera natural, la formación de recursos de excelencia en el área de salud. Son referentes
y respetados en cualquier lugar donde se desempeñen.
El legado que nos dejaron los fundadores no sólo debemos preservarlo, sino enriquecerlo, tanto los que hoy nos
desempeñamos en la Institución, como aquellos que nos sucedan.
Si bien cincuenta años parecen poco tiempo, se ha logrado que instituciones centenarias de excelencia, nacionales
e internacionales, nos consideren “pares”.
Asimismo, se ha logrado el reconocimiento de organismos vinculados a la salud en los distintos niveles, entre
ellos, la Organización Mundial de la Salud (OMS); el Consejo Nacional de Investigaciones Científicas y Técnicas
(CONICET); el Poder Ejecutivo Nacional, al aprobar la creación del Instituto Universitario CEMIC; y universidades
nacionales e internacionales.
A través de una vocación de servicio, se implementaron programas de salud comunitaria, en distintos ámbitos y
regiones de nuestro país.
El CEMIC posee mentores, que nos garantizan discípulos que aseguran un firme crecimiento.
La Institución es hoy producto del esfuerzo de todos los que se desempeñan en la actualidad y de quienes lo han
hecho en el pasado. También, de la generosidad de otras instituciones de bien público, fundaciones y benefactores,
y de entidades que brindan su apoyo a nuestros objetivos.
Es propio de nuestra naturaleza tratar de visualizar el futuro; sin embargo, éste suele ser incierto. Sin duda, aquellos
que tuvieron la visión de crear el CEMIC, hoy, cinco décadas más tarde, se sentirían sorprendidos y orgullosos. Por
cierto, no pretendemos anticipar el CEMIC en cinco décadas, cuando se celebre su centenario. No obstante, con
cohesión, fieles a nuestros objetivos y valores, y con el esfuerzo de todos, seguramente será mucho mejor que en
el presente y, también, sorprenderá y enorgullecerá a aquellos que puedan visualizarlo y a nuestros sucesores.
En nombre de la Comisión Directiva, un profundo agradecimiento a todos los que hicieron posible el CEMIC.
E
Dr. Enrique GadowPresidente del CEMICNoviembre de 2008
Innovación al servicio de la salud argentinaEl CEMIC celebra sus 50 años de vida y se mantiene fiel a sus objetivos iniciales de excelencia.
a institución es una Asociación Civil sin fines de lucro, Enti-
dad de Bien Público y Universitaria. A lo largo de sus 50 años
de vida, ha desarrollado su labor basándose en sus objetivos
fundacionales de docencia, investigación y atención médica. El
compromiso con estos objetivos y el reconocimiento nacional
e internacional han motivado el apoyo de diversos sectores de
la sociedad, empresas, instituciones y benefactores. Sin ellos,
la vocación y las ideas de los fundadores no se habrían visto
concretadas. Por ello, el CEMIC les está inmensamente agra-
decido.
El Centro de Educación Médica e Investigaciones Clínicas
(CEMIC) nació de una visión innovadora del Dr. Norberto
Quirno y de un grupo de discípulos comprometidos, que qui-
CAPÍTULO
L
EL CEMIC CELEBRA 50 AÑOS DE
EXCELENCIA EN DOCENCIA,
INVESTIGACIÓN Y ATENCIÓN
MÉDICA.
I
�50 años
sieron mejorar la medicina argentina. Esta visión ha con-
vertido a esta institución en líder y referente en el área
de la salud.
Durante 50 años, el Centro viene desplegando su mi-
sión: la docencia universitaria y la investigación para me-
jorar la asistencia médica, siempre en un clima de trabajo
creativo, con actitud de crecimiento, de superación y efi-
ciencia, y sustentado en altos valores éticos.
La docencia ha sido un pilar fundamental desde los ini-
cios de la organización, y esto se ve volcado diariamente
en el Instituto Universitario CEMIC (IUC). Los títulos
que allí se otorgan tienen validez nacional y el sello de la
excelencia médica. Los alumnos no sólo incorporan los
� 50 años
conocimientos teóricos y prácticos necesarios para
la profesión, sino que también aprenden a compro-
meterse con el paciente y con la comunidad, y a favo-
recer el respeto por la vida a partir de la aplicación
de sólidos principios éticos.
A lo largo de los años, la investigación se ha man-
tenido como esencial para el perfeccionamiento y
la actualización de los conocimientos sobre la salud.
Por ello, el apoyo y la formación de investigadores de
todas las áreas vinculadas se han transformado en un
compromiso de la institución.
Desde sus inicios, el CEMIC ha mantenido la pre-
misa fundamental de brindar servicios a la comunidad
junto al desarrollo de la asistencia médica; por ello,
se preocupa por avanzar en procesos que consoliden
el mantenimiento y la mejora de la calidad de vida.
Prueba de ello son los premios, los reconocimientos
y las certificaciones obtenidas a lo largo de todos estos años.
En la actualidad, un equipo de 2.000 personas, entre las que se encuentran 800
profesionales de diversas especialidades, trabaja para mejorar y para mantener la
salud de la comunidad.
�50 años
DR. NORBERTO QUIRNO,
DR. SAMUEL J. BOSCH,
DR. JORGE BULLRICH,
DR. GRATO E. BUR,
DR. CARLOS CAPDEVILA,
DR. MARTÍN P. DE ACHÁVAL,
DR. MIGUEL J. DE ANCHORENA,
DR. FÉLIX P. ETCHEGOYEN,
DR. JORGE FIRMAT,
DR. MARCELO GONDRA,
DR. OSCAR G. MANDÓ.
FUNDADORES VISIONARIOS
VALORES ÉTICOS
A lo largo de sus 50 años, el CEMIC ha
mantenido una absoluta dedicación por la
más alta ética profesional. Privilegia los si-
guientes valores:
CONDUCTA ÉTICA.
HONESTIDAD.
RESPETO POR EL PRÓJIMO.
PROFESIONALIDAD.
RESPONSABILIDAD.
SOLIDARIDAD.
PRESTIGIO.
COMPROMISO.
�
�
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EL CEMIC COMENZÓ CON UN GRUPO DE MÉDICOS QUE BUSCABA EL PROGRESO
DEL SISTEMA DE SALUD ARGENTINO Y UNA MEJORA EN LA ASISTENCIA MÉDICA.
HOY CELEBRA EL CAMINO REALIZADO Y SE PROYECTA HACIA EL FUTURO CON
LA MISMA PASIÓN POR SU LABOR Y POR EL SERVICIO AL PRÓJIMO QUE HA MAN-
TENIDO DURANTE SUS 50 AÑOS DE VIDA.
� 50 años
El Dr. Norberto Quirno se graduó en la Facultad de Ciencias Médicas de la Universidad de Buenos Aires y se convirtió en un especialista en la clínica de la Patología Renal.
�50 años
Pasión por el hacer
uede decirse que el Dr. Quirno padecía de una pasión incurable, una especie de virus que contagiaba a sus colegas:
la de la pasión inagotable por la excelencia médica. Su vida profesional fue un claro ejemplo de lo que es el CEMIC,
pues logró unificar sus valores éticos con la vocación por la medicina. Nacido el 25 de julio de 1904, se graduó en
la Facultad de Ciencias Médicas de la Universidad de Buenos Aires en 1929, y se convirtió en un especialista en la
clínica de la Patología Renal.
P
La docencia como oportunidad de
sembrar en otros
Como discípulo del Dr. Mariano
Castex, integró como Médico Agre-
gado la cátedra de Clínica Médica de
la Sala IV del Hospital Nacional de
Clínicas. Así dio inicio a una carre-
ra docente que sería de gran valor
para la medicina. Al mismo tiempo,
trabajó en diversas instituciones,
como el Instituto de Maternidad
de la Sociedad de Beneficencia de
la Capital Federal, y fue médico en
los hospitales del servicio de enfer-
medades endocrinas de clínica mé-
dica. Bajo la dirección del Director
Dr. Enrique del Castillo, en 1945, se
convirtió en subjefe de servicio de
la Clínica Médica del Hospital Riva-
davia, para luego convertirse en jefe
de la Sala I.
La medicina al servicio de los demás
Desde 1939 hasta 1950, fue jefe
de sección del servicio de patolo-
gía renal anexo a la Academia Nacional de
Medicina. Cinco años más tarde, fue nom-
brado interventor del Hospital Rivadavia,
del que fue director interino durante 1956.
Luego, obtuvo por concurso la jefatura de
la Sala XX del Hospital Rivadavia.
También colaboró, ese año, con el Minis-
terio de Asistencia Social y Salud Pública en
su anteproyecto para que los estudiantes de
Medicina de los últimos años de la carrera
asistieran a los establecimientos como prac-
ticantes. A lo largo de su distinguida trayec-
� 50 años
toria, generó un nutrido grupo de discípulos, con quienes
fundó el CEMIC. Como reconocimiento a su trayectoria,
en 1963 fue nombrado profesor titular de la segunda cáte-
dra de Clínica Médica de la Facultad de Ciencias Médicas
de la Universidad de Buenos Aires.
La investigación como camino al progreso
El Dr. Quirno dejó como legado más de un centenar de
trabajos científicos. Por su excelencia en la investigación,
fue considerado merecedor de diversas distinciones, en-
tre las que se destaca el Premio 1950 de la Sociedad de
Medicina Interna por el trabajo sobre Insuficiencia renal por
lesión tubular aguda, que presentó junto a los Dres. Goñi y
Croxacto.
Numerosos congresos nacionales e internacionales con-
taron con su presencia, y varias veces brindó conferencias
especialmente referidas a la clínica de la patología renal.
Por su gran compromiso hacia el progreso de la medicina,
distinguidas academias lo invitaron a formar parte. La Ame-
rican Collegue of Physicians lo eligió como miembro en
1965, y dos años después, integró la Societé Internationale
de Nephrologie. Luego, fue designado miembro titular de la
Academia Nacional de Medicina por la sección de Medicina
y Especialidades Médicas.
El Dr. Quirno falleció el 9 de enero de 1972 debido a un
problema cardíaco, pero su legado estará siempre presente
junto al espíritu del CEMIC. Se destacó en saber elegir a sus
colaboradores y en estimularlos para que cada uno diera lo
mejor de sí mismo. Su persona sigue siendo un ejemplo de
la institución, que vivirá eternamente agradecida.
�50 años
La salud argentina en los �0
n la década del ´40, la atención médica estaba organizada de distintas formas, influenciada por la realidad económica de los grupos sociales.
Los sectores más acomodados de la sociedad podían acceder a un servicio privado en consultorios y sanatorios. Este sistema estaba general-
mente formado a partir de un médico o de grupo de médicos que compraba una casa e instalaba un lugar donde ejercer su actividad. Muchos
de ellos eran destacados profesionales. De aquí surgieron los sanatorios Otamendi y Miroli, Podestá, Bosch y otros.
Por otro lado, las colectividades extranjeras eran atendidas en sus mutuales, organizaciones comunitarias privadas con carácter social y orien-
tadas a sus afiliados. Así, se formaron los centros asistenciales de las diferentes comunidades.
Para los sectores de menores recursos de la sociedad, existía la atención hospitalaria a cargo del Estado y de las sociedades de beneficencia.
E
Confusiones por la desorganización
A principios de los años ´40, la política sa-
nitaria argentina no cubría las necesidades de
toda la población. A pesar de que existía un
organismo nacional, el Departamento Nacional
de Higiene, cada provincia tenía su propia orga-
nización sanitaria.
Así, se producían dificultades en el manejo
hospitalario por parte del gobierno nacional,
los gobiernos provinciales, las sociedades de
beneficencia e, incluso, la Municipalidad de la
Ciudad de Buenos Aires, donde existía la Di-
rección General de Administración Sanitaria y
Asistencia Pública. Es decir, distintas institucio-
nes autónomas se dedicaban a los mismos fines,
pero se carecía de un organismo centralizador
que lograra la eficiencia de la política sanitaria.
Reestructuración de la asistencia social
Los cambios que ocurrieron de 1945 a
1955 reflejaban un fenómeno mundial de
creciente participación estatal en el planea-
miento y la administración de servicios de
salud. Tras el fin de la Segunda Guerra Mun-
dial, en 1948, se constituyó la Organización
Mundial de la Salud, que tuvo una fuerte in-
fluencia en la atención médica internacional.
De este modo, el sistema de salud iba en-
cauzándose hacia una mejor planificación.
En nuestro país, en 1946, se creó el Mi-
nisterio de Salud Pública y Asistencia Social,
que fue un gran paso para la organización de
la medicina. El nuevo Ministerio implicó dar-
le mayor importancia a la salud y mejorar
el sector hospitalario existente. Se crearon
hospitales en el interior del país, y los exis-
tentes pasaron a tener un mayor prestigio
asistencial, con grandes profesores y cáte-
dras universitarias, aunque aún carecían de
confort.
Acompañando estos cambios, desde 1945
aparecieron las primeras obras sociales del
país. Los gremios comenzaron a organizar
un sistema de salud para sus afiliados que se
mantiene en la actualidad. Los trabajadores
contaban con una red de protección médica
para ellos y para sus familias, a cambio de un
aporte que se deducía de sus sueldos.
El sistema de salud de aquella época esta-
ba comenzando a organizarse. Poco a poco,
se iniciaba un proceso de modernización del
aparato estatal.
10 50 años
La formación de un proyecto en los �0
La Sala I del Hospital Rivadavia
El Hospital Rivadavia, ubicado en Sán-
chez de Bustamante y la Avenida Las He-
ras, en la ciudad de Buenos Aires, está
compuesto por diversos pabellones y
salas que siguen el modelo arquitectóni-
co francés. En esa época, la medicina se
hallaba separada en dos grandes vertien-
tes: la Clínica y la Cirugía. Los médicos
se dedicaban a una u otra tendencia, y así
se fueron dividiendo las salas orientadas
a tratamientos distintos. Entre estas sub-
estructuras, se encontraba el Pensionado,
un internado médico creado en 1934 que
ocupaba dos pisos y tendría una gran
trascendencia en el futuro, pues daría lu-
gar al CEMIC.
En el año 1950, los jóvenes médicos
Martín de Achával, Samuel Bosch, Félix
Etchegoyen y Oscar Mandó fueron invi-
tados por el Dr. Norberto Quirno a in-
gresar a la Sala I del Hospital Rivadavia.
Dicha sala de Clínica Médica se hallaba
bajo la dirección del Dr. Carlos Pinedo,
especialista en clínica neurológica, y tenía
como subjefe al Dr. Quirno. Allí los profe-
sionales estrecharon fuertes vínculos que
mantendrían en el futuro.
Practicantado, el antiguo modelo europeo
En aquella época, la medicina argen-
tina seguía el modelo de educación europea,
cuya base era el llamado practicantado. Los es-
tudiantes de los dos últimos años de la carrera
de Medicina eran guiados por profesionales de
reconocida experiencia con el objetivo de ter-
minar de afianzar sus conocimientos antes
de egresar.
Por las mañanas, entre las 8 y las 12, los
alumnos tomaban contacto directo con los
casos más interesantes y aprendían de los
Sala I del Hospital Rivadavia.
1150 años
en la guardia de los hospitales para terminar
de tener contacto con los enfermos. Allí se
encontraba un jefe de guardia, que era un
médico recibido, y los jóvenes estudiantes.
Un equipo de trabajo
Varios médicos que se habían marchado
del país volvieron con ideas renovadas so-
bre la medicina. Desde los Estados Unidos,
trajeron adelantos sobre educación médica,
instrumentos técnicos y conocimientos cien-
tíficos. Este conjunto de profesionales actua-
ba en el sanatorio Bosch y en la sala I del
Hospital Rivadavia, donde fueron estrechan-
do lazos hasta constituir un excelente equipo
de trabajo.
Descentralización a mediados de la década del ‘50
Las autoridades argentinas solicitaron la
colaboración de la Oficina Sanitaria Paname-
ricana (OSP) para que analizara la situación
de la salud del país de los años ‘50. La OSP
presentó diversas sugerencias, entre las que
se establecía la necesidad de descentralizar
los servicios y transferir funciones a los go-
biernos provinciales y municipales. De este
modo, el organismo sanitario central se limi-
taba a actuar como agente normativo, técni-
co y de ayuda financiera, orientando y coor-
dinando a los demás organismos en lo que
fuera necesario.
Siguiendo estos cambios, en el Hospital
Rivadavia se realizó un profundo diagnósti-
co acerca del Pensionado y su inserción en
la estructura hospitalaria. Se vio que el Pen-
sionado presentaba diversos inconvenientes,
pues no cumplía con los objetivos técnicos
y asistenciales que se había propuesto en el
momento de su formación, y los ingresos no
llegaban a cubrir los gastos que originaba
el propio sistema. En consecuencia, el Mi-
nisterio de Asistencia Social y Salud Pública
decidió clausurar el Servicio de Pensionado
y habilitar una sala de clínica médica en su
lugar. El Dr. Quirno fue el encargado de orga-
nizar dicha sala, primero de modo provisorio
y luego en forma definitiva, tras haberse rea-
lizado el concurso correspondiente.
Teniendo en cuenta ciertos parámetros
para el ingreso, como la capacidad profesio-
nal y la personalidad, se fueron incorporando
nuevos profesionales que estaban dispuestos
a vivir la novedosa experiencia. El Dr. Carlos
Pinedo, ya jubilado, pudo regresar a la labor
hospitalaria junto a estos profesionales.
La excelencia profesional del Dr. Norberto
Quirno y su natural liderazgo lo hicieron la
cabeza indiscutida del grupo. El Dr. Fauvety se
desempeñó como subjefe de la Sala XX y re-
emplazaba al Dr. Quirno cuando éste se au-
sentaba. Los médicos tomaron contacto con
las dificultades y los desafíos que planteaba
expertos. Asimismo, los estudiantes tenían
la posibilidad de elegir a los médicos que se
convertirían en sus tutores. Por las tardes, los
doctores atendían sus consultorios particula-
res, mientras que los practicantes quedaban
12 50 años
En esta época, surgió la posibil idad de concretar el proyecto de una unidad hospita-
laria, idea que había sido elaborada en la Sala I del Hospital Rivadavia y en la Clínica
Bosch. El espíritu de servicio y de vocación médica que inspiraba a cada uno de los
integrantes de aquel pabellón quedó claramente demostrado en la tarea de proveer
a la sala de todos los materiales necesarios para su existencia y su funcionamiento.
El Dr. Achával no olvida aquellas mudanzas hechas con su propio auto “con las camas
en el techo”. Dichas camas eran regalos de antiguas enfermas para apoyar el nuevo
proyecto. De este modo, los mismos médicos se ocuparon de conseguir todo lo que
necesitaban, como recuerda el Dr. Félix Etchegoyen: “Se metieron a recoger todo
lo que no tenía destino del Ministerio, lo que estaba en un depósito”. Además, los
doctores cuentan que ellos mismos eran los encargados de la l impieza de la sala,
barriendo y desinfectando “descalzos y con los pantalones arremangados”. Con en-
tusiasmo y dedicación, lograron l impiar y equipar la sala para ponerla en marcha.
“LOS MÉDICOS DESCALZOS Y CON LOS PANTALONES ARREMANGADOS”
la actividad médica, y fueron conformando
un grupo cada vez más unido y profesional.
Aquellos años fueron de preparación para
una aspiración mayor que ya se hacía cada
vez más cercana.
El plan de modernizar la medicina argentina
En 1958, el país atravesaba dificultades
políticas y enfrentamientos entre distintos
modos de pensamiento. En la medicina, la
Argentina también permanecía estancada en
los principios más tradicionales que se vol-
vían arcaicos con el tiempo, mientras que en
el mundo se producían grandes cambios.
Pero el grupo de médicos dirigidos por
el Dr. Quirno estaba iniciando la dura tarea
de dar origen a una nueva forma de hacer
medicina. El primer empuje que permitió
efectivizar las intenciones fue impulsado por
el Dr. Eduardo Braun Menéndez. Su aporte
material y su empeño intelectual por reno-
var la atención médica fueron claves para
transformar aquellas ideas innovadoras en
una realidad. El Dr. Braun Menéndez, que fue
varias veces mencionado como merecedor
del Premio Nobel de Medicina, mantenía una
cercana amistad con el Dr. Quirno, quien era,
además de su amigo, su médico personal.
Gracias a sus encuentros frecuentes, el Dr.
Braun Menéndez se fue interesando en los
proyectos de los médicos que trabajaban en
la Sala XX, y dio mucho apoyo a sus ideas. Doctor Eduardo Braun Menéndez.
1350 años
Los primeros pasos en la transformación médica
l CEMIC comenzó su accionar de hecho el 16 de noviembre de 1958 y se conformó bajo la forma jurídica actual el 22 de
febrero de 1960. Sus fundadores fueron los Dres. Norberto Quirno, Samuel Bosch, Jorge Bullrich, Grato E. Bur, Carlos Cap-
devila, Martín P. de Achával, Miguel J. de Anchorena, Félix P. Etchegoyen, Jorge Firmat, Marcelo Gondra y Oscar G. Mandó.
EEn el principio, sus aspiraciones se limi-
taban a reunir recursos para mejorar la
atención de los enfermos que estaban a
su cargo en la Sala XX. No eran conscien-
tes de que el nacimiento del CEMIC, lle-
vado a cabo en una sala de clínica médica
de un hospital público, sería el germen de
toda una renovación en la atención y en
la educación médica del país.
La institución creció siguiendo un pro-
yecto médico amplio y ambicioso: la me-
jor medicina hecha con los profesionales
más capacitados y comprometidos. Ape-
nas iniciada la tarea de evolución que en-
carnó la institución, recibió un golpe do-
loroso, pues en 1959 murió el Dr. Braun
Menéndez en un accidente. Sus ideas, su
impulso y su aporte material habían sido
cruciales para el desarrollo del novedoso
plan de educación médica. Además, su do-
nación económica inauguró una forma de
sostenimiento en los primeros tiempos.
Siguiendo su ejemplo, diversas familias li-
gadas por amistad o por lazos familiares
con los primeros médicos de la organi-
zación contribuyeron al desarrollo del
CEMIC.
Un grupo de mujeres inició el Volun-
tariado, un modo distinto de atender a
los pacientes, que contaba con una es-
tructura organizada. A su vez, se innovó a
través del mantenimiento y la ampliación
de un laboratorio de análisis clínicos y de
la instalación de un servicio de radiología
propio. En poco tiempo, estos cambios
produjeron un éxito inicial: se logró re-
ducir el promedio de días de internación
de 21 días en 1959 a 10, en 1962.
El Dr. Norberto Quirno propuso al
Nobel de Medicina Dr. Bernardo Hous-
say, como reemplazante del fallecido Dr.
Braun Menéndez para cumplir con la ta-
rea de asesor científico del CEMIC. Por
entonces, se instituyó su primera Comi-
sión Directiva.
Los médicos de la institución continua-
ban con el salto profesional que se ha-
bían propuesto. Los primeros pasos en la
construcción de una nueva realidad mé-
Colocación de la piedra fundamental de la sede Saavedra.
CAPÍTULO II
14 50 años
dica consistían en la existencia de consultorios
externos vespertinos y de la guardia médica
activa permanente a cargo de los residentes,
toda una novedad para la época.
Desde su origen, el CEMIC se inspiró en el
sistema de salud norteamericano para mejo-
rar la medicina argentina. El Dr. Jorge Firmat,
un excelente profesional que había estado ra-
dicado en los Estados Unidos, aportó sus co-
nocimientos para la introducción de las nove-
dades más importantes en educación médica.
Entre ellas, se destacó el sistema de residencia
médica, una contribución esencial para la for-
mación profesional de posgrado.
El sistema de residencia médica
Hasta entonces, los alumnos de Medicina
aplicaban sus conocimientos en el practican-
tado. Como un avance frente a ese sistema, el
CEMIC instaló en 1959 el plan de residencia
médica que consistía en un ambicioso pro-
grama de perfeccionamiento. De este modo,
el Centro se propuso incentivar la educación
médica y el interés investigativo del profesio-
nal y, como consecuencia, aumentar la calidad
de los servicios asistenciales. La residencia
con dedicación exclusiva y full time le otorga-
ba al nuevo médico la responsabilidad directa
en el cuidado del paciente, bajo la supervisión
constante de un tutor. A su vez, preparaba al
profesional para decidir acerca de la orien-
tación en una especialidad y le daba la posi-
bilidad de desarrollar su potencial científico.
El plan del CEMIC fue marcando el rumbo
hacia el sistema educativo que se utiliza ac-
tualmente.
EL PLAN DE RESIDENCIA MÉDICA DEL CEMIC FUE MARCANDO EL RUMBO HACIA EL
SISTEMA EDUCATIVO QUE SE UTILIZA ACTUALMENTE.
El primer riñón artificial portátil del país
Entre las novedades tecnológicas que se
introdujeron en los primeros tiempos del
CEMIC, se encuentra el primer riñón arti-
ficial portátil de la Argentina. Este novedoso
instrumento, que había sido probado duran-
te la Guerra de Corea, posibilitaba un mejor
tratamiento de la insuficiencia renal aguda. La
noticia de la llegada del aparato apareció en
los principales medios de prensa de la épo-
ca y revolucionó la atención de los enfermos
renales.
Los médicos llamaban familiarmente al
riñón artificial “el lavarropas”. Hacer una
diálisis en esa época implicaba ocho ho-
ras de preparación, más seis o doce de
procesamiento. Es decir que, cuando a
un médico le tocaba realizar esta tarea,
tal vez volvía a su casa recién al tercer
día de haber partido. A pesar de los sa-
crificios y de las dificultades que surgían
de la tarea, predominaba un fuerte espí-
ritu médico comprometido con la salud.
EL LAVARROPAS
1550 años
La farmacia organizada
El CEMIC impulsó la creación de una farmacia efi-
ciente en 1963 para solucionar el problema de la ad-
ministración y provisión de medicamentos. El Hospital
Rivadavia tenía problemas con el abastecimiento de
medicinas, y la imposibilidad económica que tenían mu-
chas familias de enfermos para afrontar los gastos de
los tratamientos dificultaba cumplir con las prescripcio-
nes médicas con exactitud.
Comenzó a establecerse la provisión de medicinas
y materiales necesarios. Con el tiempo, logró instau-
rarse un sistema organizado de venta a un bajo costo,
lo que permitía reinvertir para adquirir más materia-
les. Se compraba todo lo necesario directamente a los
laboratorios fabricantes y se vendía con un pequeño
recargo. Esto permitió que pudieran proporcionarse
medicamentos de forma gratuita a los pacientes de más
bajos recursos.
De este modo, la calidad y accesibilidad de la nueva
farmacia aseguraba que los pacientes cumplieran sus
tratamientos con el material adecuado. Animada por un
espíritu solidario, la experiencia de la farmacia fue un
importante avance para la institución.
El Centro Piloto de atención médica para la comunidad
En 1963, el Ministerio de Asistencia Social y Salud
Pública autorizó a la institución a concretar uno de
sus más importantes proyectos: la organización de la
Sala XX del Hospital Rivadavia como Centro Piloto de
Educación en Medicina Integral. El propósito era crear
un centro para capacitar al personal médico y auxiliar,
ya no solo para la atención del paciente, sino del ser
humano como unidad biológica, psicológica y social. Se
pretendía organizar un plan proyectado a la comuni-
dad y la conducción de una unidad hospitalaria basada
en los conceptos más modernos de la atención médica
integral.
Con el decreto presidencial firmado en 1965, se le
daba realidad legal a la situación que ya venía existiendo
hacía varios años: el Centro Piloto de Atención Médica
para la Comunidad. Así, lo que había sido inicialmen-
te una sala de clínica médica se transformaba en un
pequeño hospital, bajo la autoridad del CEMIC y del
Ministerio de Asistencia Social y Salud Pública. Se puso
en marcha la remodelación de las instalaciones y se las
proveyó de los más avanzados instrumentos médicos
conocidos en aquella época. A su vez, la medicina pre-
ventiva, asistencial y social intentaba unificarse, algo
verdaderamente renovador para aquellos años ´60.
El ámbito del Hospital Rivadavia fue convirtiéndose
para el CEMIC en el espacio médico, mientras que el
nuevo edificio de Sánchez de Bustamante 2560, su única
propiedad en aquellos años, se transformaba en el cen-
tro administrativo de la institución, aunque también allí Una de las páginas de La Nación, en 1963, estuvo
dedicada a los primeros pasos del CEMIC.
El Plan de Salud del
CEMIC nació como
una forma de financia-
miento para las activi-
dades institucionales
de Docencia, Investiga-
ción y Asistencia Mé-
dica. Lo sigue siendo y
así respeta el carácter
no lucrativo de la ins-
titución.
PLAN DE SALUD
16 50 años
se desarrollaban actividades académicas.
A partir de la autorización oficial del Centro Piloto, el CEMIC
decidió crear dos nuevos departamentos en la Sala XX, uno de Me-
dicina Comunitaria y otro de Ciencias de la Conducta. Así, resulta-
ba ser uno de los ámbitos más modernos de la medicina argentina.
La institución crecía y, con ella, la necesidad de perfeccionar lo que,
con esfuerzo, se estaba logrando. Debían buscarse métodos alter-
nativos de financiación y, a su vez, una organización más adecuada
que permitiera brindar una atención médica integral.
El programa de educación en medicina integrada
En el plan, se instruía a los alumnos de Medicina en el cuidado
integral de la salud, a partir del trabajo en equipos. El cargo de
profesor titular de Medicina Interna en la Universidad de Buenos
Aires que obtuvo el Dr. Quirno favoreció el éxito de este pro-
yecto.
Los estudiantes de cuarto año comenzaban a trabajar en el cui-
dado de familias en las cuales alguno de sus miembros sufría una
enfermedad crónica. De este modo, el futuro médico se instruía
en un caso específico y estudiaba cómo el problema de salud re-
percutía en la psiquis del paciente y cómo esto alteraba el normal
funcionamiento de la estructura familiar. En quinto año, los estu-
diantes aprendían todo lo relacionado a los aspectos administra-
tivo y organizativo de la atención médica. Finalmente, en el último
año y bajo la supervisión de médicos capacitados, proveían a estas
familias de atención médica gratuita.
Luego se implementó la idea de asistir a las comunidades más
desprotegidas de la sociedad. La nueva obra comenzó a funcionar
en Villa Saldías, en Costanera, y Mitre y Matienzo, en el barrio
de Colegiales, donde se puso en marcha un centro de salud. A
pesar de la modestia y sencillez de las instalaciones, la calidad
de los servicios ofrecidos era altísima. Para 1966, 18 alumnos de
Medicina, supervisados por un equipo de profesionales, prestaban
servicios a aproximadamente 800 familias, es decir, a unas 3.000
personas. La demanda fue tan grande que se decidió ampliar las
instalaciones.
El nuevo Centro contaba con programas de salud materno-in-
fantil, saneamiento ambiental e, incluso, se atendían los problemas
de aprendizaje de los niños que concurrían a la escuela. Conjun-
tamente, se llevó a cabo una investigación para relacionar trastor-
nos escolares con variables psicológicas y sociológicas.
La magnitud de este proyecto fue reconocida por las autori-
dades nacionales y municipales. Se hicieron las gestiones corres-
pondientes y, como fruto de ello, la Secretaría de Salud Pública y
la Municipalidad aportaron las vacunas necesarias para organizar
la primera campaña de vacunación antipoliomielítica realizada en
el lugar. Además, como consecuencia de un acercamiento exitoso
con el Centro de Salud Mental y con Alcohólicos Anónimos, se
incluyó el tratamiento terapéutico de las enfermedades psiquiá-
tricas y del alcoholismo.
La acción solidaria llevada a cabo tiene un valor indiscutido
para los médicos del CEMIC, donde la labor científico-profesional
estuvo siempre acompañada por un verdadero espíritu de servi-
cio hacia los demás, y en particular, hacia los más necesitados. Ex
alumnos del Programa de Educación Médica Integrada formaron
luego, ya como médicos, el primer plantel de residentes en el
Programa de Medicina Rural.
1750 años
hacia la actividad de los residentes recién llegados. Poco a poco,
con la colaboración de los profesionales de los ingenios, comenzó
a generarse un mejor ambiente. Sin embargo, se decidió concentrar
todos los esfuerzos en Ledesma, donde el plan estuvo presente du-
rante nueve años, mientras que en La Esperanza el proyecto apenas
superó el primer año.
En una tarea que abarcaba un plano asistencial, se inició un plan
que implicaba la creación de centros de salud en comunidades ne-
El programa de residencia rural
En 1964, se organizó la primera residencia de medicina general
en el ámbito rural, que tuvo su centro en la región del noroeste
argentino. El proyecto se implementó en los ingenios azucareros La
Esperanza y Ledesma, en la provincia de Jujuy. Esta residencia sería
el origen de un Plan de Salud Rural.
En un principio, hubo que afrontar diversas dificultades, pues
existía cierta resistencia de parte de los médicos de los hospitales
Pase de guardia de residentes.
18 50 años
cesitadas y un programa de prevención de
enfermedades a través de vacunaciones y
educación sanitaria. Incluso, llegó a crear-
se un periódico con información útil para
la comunidad. En poco tiempo, el plan se
expandió a otras poblaciones más alejadas
y mejoró la calidad sanitaria de más per-
sonas.
para analizar y aliviar diversas patologías que,
hasta el momento, les resultaban desconoci-
das. En el Hospital del ingenio, se instauró el
sistema unificado de historias clínicas, una
de las novedades que aplicaban los médicos
del CEMIC para centralizar los conocimien-
tos sobre la enfermedad y sobre el paciente.
Este avance constituía un requisito indispen-
sable para una mejor asistencia.
El programa captó la atención de institu-
ciones de la envergadura de las universida-
des de Harvard y Rochester, lo que motivó
encuentros con representantes de dichas
casas de estudios, que terminaron en la
elaboración de un plan de intercambio de
profesionales.
En 1964, se organizó la primera residencia de medicina general en el ámbito rural. El nacimiento de mellizos en la localidad de Ledesma, en Jujuy.
Los hospitales de los ingenios funcionaban
con sus propios médicos y con los residen-
tes, seleccionados previamente mediante un
examen de conocimientos y una entrevista
personal. Durante el primer y segundo año,
se dedicaban tres meses a cada una de las
cuatro actividades básicas: clínica médica,
clínica quirúrgica, pediatría y, finalmente,
ginecología y obstetricia. En el tercer año,
cada médico podía elegir la especialidad que
quisiera seguir. Acompañando este progre-
so, la labor de la enfermería comenzó a je-
rarquizarse, y las enfermeras del ingenio se
capacitaban en Buenos Aires.
Uno de los beneficios de este proyecto
era que los residentes hallaban los medios
Hospital de Ledesma.
1950 años
Un Hospital Escuela
l CEMIC siempre ha considerado a
la educación como una herramienta
fundamental para mejorar la asisten-
cia médica. A lo largo de sus 50 años,
el CEMIC ha sido, como lo recuerda
el Dr. Horacio Mitchell, un “vivero de
médicos”. La institución asumió el
compromiso con la educación uni-
versitaria desde su inicio, a través de
su vínculo con la Facultad de Medici-
na de la Universidad de Buenos Aires
(UBA). A través de la labor desarrolla-
da gracias a esta asociación, el CEMIC
obtuvo el reconocimiento oficial para
crear en 1997 el Instituto Universita-
rio CEMIC (IUC). Hoy en día, allí se
desarrollan las carreras de Medicina,
Citotecnología, la Licenciatura en En-
fermería, 13 carreras de especializa-
ción y dos residencias universitarias
que tienen como base las residencias
médicas.
La vinculación del Centro con la
Facultad de Medicina de la UBA se
remonta a 1958. Los alumnos cur-
saban en el CEMIC una cátedra de
Clínica Médica y una de Ginecología
y Obstetricia. La presencia del Dr.
Quirno significó un impulso a la meta
académica de la institución, y como
E
EL CEMIC SIEMPRE HA CONSIDERADO
A LA EDUCACIÓN COMO UNA HE-
RRAMIENTA FUNDAMENTAL PARA
MEJORAR LA ASISTENCIA MÉDICA.
reconocimiento a su apoyo se creó
el Premio Profesor Norberto Quir-
no. A través de un concurso bianual,
se le otorga al mejor trabajo en Me-
dicina Interna del país, con diploma
y medalla.
CAPÍTULO III
20 50 años
La Unidad Docente Hospitalaria
Lo común en Medicina era cursar los tres primeros años en la
universidad y los tres últimos, en centros hospitalarios de la ciudad. El
problema era que los alumnos tenían que peregrinar de un hospital
a otro para cursar distintas cátedras. Para centralizar la actividad, a
principios de la década del ´70, se creó la Unidad Docente Hospita-
laria, que comprendía cuarto, quinto y sexto año de la carrera. De
este modo, el alumno cursaba un conjunto de materias en una misma
Unidad en uno de los hospitales incorporados.
El CEMIC no tardó en unirse al sistema, que combinaba su espíritu
profesional y el aporte académico de la UBA. Durante ocho horas
diarias, se aprendía en pequeños grupos interrelacionados. Así se lle-
gaba a un desarrollo integral de la medicina para evitar los problemas
de una especialización demasiado profunda. Los beneficios extra de la
Unidad Hospitalaria del CEMIC, que posibilitaban una mejor forma-
ción profesional, eran las residencias en zonas urbanas marginales o
en ámbitos rurales, específicamente en Jujuy, y las novedades metodo-
lógicas de la institución, por ejemplo, el sistema de tutorías.
2150 años
El Internado Rotatorio
Pronto, el CEMIC propuso una experiencia
de capacitación novedosa en el país y que aún
se mantiene vigente: el Internado Rotatorio.
El cambio fue impulsado por el Director de
Docencia, el Dr. Félix P. Etchegoyen, en 1971,
que se inspiró en las universidades europeas
y estadounidenses y adaptó el sistema a la
cultura de nuestro país. En aquella época, el
CEMIC era la única institución del país que
tenía un sistema de pregrado como éste.
El plan que se propuso continuaba con la
misma educación del cuarto, quinto y sexto
año, pero encerrando su contenido en un pe-
ríodo de dos años y abarcando el tercero en
una nueva labor práctica. Con el acuerdo de
la Facultad, el sexto año fue transformado en
el Internado Rotatorio, algo similar a la Resi-
dencia pues implica estar en servicio perma-
nentemente. A lo largo de los años, se ha exi-
gido a los estudiantes una mayor dedicación
en tiempo y estudio, y, a cambio, ellos reciben
un aprendizaje más completo e integral.
Los alumnos pasan dos meses y medio en
cada especialidad, es decir, en los departa-
mentos de Clínica, de Cirugía, de Pediatría y
de Ginecología/Obstetricia. Si bien no tienen
matrícula profesional y no toman decisiones
de modo autónomo, son como un médico
más trabajando al servicio del paciente. La
“Experiencia Pedagógica CEMIC”, como
anteriormente se llamaba este proyecto,
presenta características distintas, ya que le
otorgan mayor responsabilidad y experien-
cia al estudiante.
22 50 años
Una educación personalizada
En los años ´70, se implementó otro sistema
novedoso que se mantiene hasta el día de hoy:
las tutorías. De entre los profesionales de la
institución, los alumnos tienen un médico tutor,
que los guiará personalmente y asesorará en
sus decisiones. Este apoyo es académico, profe-
sional y, en especial, humano.
En 1976 se creó la Sección de Pedagogía y
Sociología Médica, para responder a las necesi-
dades educativas del CEMIC. La nueva sección
evaluaba y analizaba el proceso de aprendizaje
de los alumnos de pregrado y de los residentes.
También modificó el sistema de admisión en
la Unidad Hospitalaria del CEMIC y convocó
al Dr. Manuel del Carril como Asesor Docen-
te. Este profesional estuvo en el CEMIC hasta
su muerte e influyó mucho en el sistema edu-
cativo, al que se dedicó con gran entusiasmo.
Cuando le preguntaban cuál era su profesión,
no decía “médico”, sino: “Soy un pedagogo, un
educador médico”.
Programa de Intercambio de Médicos Residentes
Para ampliar las posibilidades educacionales
de los médicos en su etapa de formación y de
especialización de posgrado, se creó el Progra-
ma de Intercambio de Médicos Residentes. Este
sistema les daba la oportunidad a los jóvenes
profesionales del CEMIC de hacer un intercam-
bio con el Hospital Naval de Puerto Belgrano,
en el sur de la provincia de Buenos Aires.
En 1985, el Centro firmó convenios con la
Facultad de Medicina de la Universidad de Nor-
th Carolina y con el Baylor College of Medici-
ne de Huston, ambos en los Estados Unidos.
Dos años más tarde, se sumó la Universidad
de Tennessee. A través de estos convenios, se
establecía un intercambio de docentes y de es-
tudiantes por un período determinado.
Actualmente, el CEMIC tiene Convenios de
Cooperación Académica con universidades y
hospitales nacionales e internacionales, inclu-
yendo destacados centros del Reino Unido y
de los Estados Unidos.
2350 años
“El CEMIC es mi familia”
Escuelas Paramédicas
Para acompañar el desarrollo de la la-
bor paramédica, el CEMIC contaba con el
Curso de Auxiliares de Enfermería inau-
gurado en 1972. Años después, se abrió el
Curso de Citotecnología, y se estableció
la Escuela de Disciplinas Paramédicas a
través de un convenio con la Universidad
del Salvador. En 1980, se inauguró la Es-
cuela de Enfermería Profesional, que se
destaca, hasta el día de hoy, por su alto
nivel académico y por las diferentes activi-
dades extracurriculares que ofrece, como
congresos, pasantías y cursos de capaci-
tación. Desde 1978 hasta 1997, se forma-
ron en sus aulas unos 345 Auxiliares de
Enfermería, y a partir de 1982 hasta 1999,
egresaron 85 Enfermeros profesionales
del CEMIC.
¿Por qué di mis primeros y últimos pasos como enfermera en el CEMIC? Porque siempre me sentí como si estuviera en mi casa. Aunque parezca una frase hecha, el CEMIC es mi familia. Aquí viví con el corazón al 100%. Y aunque ya no trabajo allí como enfermera, armamos un grupo de teatro que me mantiene unida a la institu-ción.
Una vida de sacrificioLo importante es valorar cómo el grupo inicial hizo todo, desde la nada. Porque a algunos médicos no les alcanzaba ni para vivir, pero sin embargo, el entusiasmo de seguir los impulsó. Y es una vida sacrificada. Cuando llegaban los nuevos médicos que habían ganado la beca para entrar, preguntaban hasta qué hora se tenían que quedar. Y yo les decía: “Hasta que sea necesario, doctor, usted está haciendo la residencia. La ganó, pero ahora hay que seguir ganando. Sepa que, de aquí en más, va a ser peor”.
Siempre avanzandoDesde Enfermería siempre queríamos crecer, no nos quedábamos atrás. Cuando ha-bía un curso de especialización, averiguábamos a quién del sector podíamos mandar. Incluso, una de las enfermeras se fue por seis meses a México a profundizar sus es-tudios. Cuando a los candidatos que quieren trabajar en Enfermería se les pregunta la razón por la que eligen el CEMIC, siempre dicen “porque es el mejor lugar”. Y es verdad.
Por Aída Benítez - Ex jefa de Enfermería y actual coordinadora del grupo de teatro del CEMIC
24 50 años
Sistema de Becas
El CEMIC mantenía un sistema de becas con centros médicos y
educativos del exterior, especialmente de los Estados Unidos. Los
médicos podían obtener una beca para una formación más sólida,
El Dr. Alejo Florín Christensen, al recordar los años
´70, cuenta: “Era una época distinta. Los residentes
de Clínica Médica teníamos que hacer todo el tra-
bajo que ahora hacen los técnicos en el laboratorio.
Era una parte de nuestro entrenamiento, pero era un
trabajo de hormiguita. Ahora, en la Guardia, hay alre-
dedor de 15 médicos, y antes había solamente dos: un
clínico y un cirujano. Teníamos a cargo toda la sala y
las emergencias, todo con poca gente.”
“UN TRABAJO DE HORMIGUITA”Prevención en Salud
Bajo el lema “Prevención en Salud”, en la década de los ´90, comenzó
un ciclo de conferencias públicas y gratuitas, que continúan dictándose
en la actualidad, sobre temas de salud de interés para la comunidad.
Así, acompañando este proceso de apertura informativa, salió el pri-
mer número de la revista Prevención en Salud e, incluso, se emitió un
programa televisivo y un programa en Radio Cultura (FM). La revista
permitió una comunicación trimestral fluida con los pacientes, pues les
daba a conocer la información médica más importante y actualizada.
Había entrevistas a los profesionales, se escribía sobre los adelantos más
recientes de la medicina y se respondían todas las inquietudes que plan-
tearan los lectores con respecto a la salud. A través de los medios, se
intentaba fomentar una actitud de prevención en toda la comunidad.
Gracias al apoyo de numerosas empresas, instituciones y benefactores; el IUC otorga 130 becas por año para estudiar Medicina en sus aulas.
que luego aplicarían en la institución de origen. Actualmente, el IUC
estimula la formación médica al otorgar 130 becas, por año, a alum-
nos y a residentes.
2550 años
Hospital Asociado
En 1992, la UBA designó al CEMIC
como Hospital Asociado. Por medio de
este acuerdo (en la foto, arriba), alumnos
de la UBA, desde primer año de la carre-
ra de Medicina, participaban del programa
educacional del centro médico. A partir de
1994, fueron aprobándose las carreras de
Médicos Especialistas en Medicina Interna
y de Médicos Especialistas en Pediatría. Es-
tos pasos fueron marcando el ingreso de
la organización al ámbito de los estudios
superiores.
El CEMIC se convirtió en la primera ins-
titución de la medicina privada sin fines de
lucro de la Argentina, que fue a la vez Hos-
pital Asociado a la Facultad de Medicina de
la UBA y que dictó toda la Carrera de Me-
dicina en sus propias instalaciones.
El Instituto Universitario CEMIC (IUC)
En 1997, el Poder Ejecutivo Nacional
aprobó la creación del Instituto Universi-
tario CEMIC (IUC) que puso en funciona-
miento la Escuela de Medicina, con seis ca-
rreras de especialización que rápidamente
llegaron a 13. Se trata de Anatomía Patoló-
gica, Bioquímica Clínica, Cirugía, Diagnós-
26 50 años
tico por imágenes, Genética Médica, Gine-
cología y Obstetricia, Infectología, Medicina
Familiar, Medicina Interna, Nefrología y
Medio Interno, Ortopedia y Traumatología,
Pediatría y Urología Médica.
Entre los años 1998 y 2000, la Comisión
Nacional de Evaluación y Acreditación Uni-
versitaria (CONEAU) acreditó todas las
carreras de especialización y la carrera de
Medicina del IUC.
En 2002, se creó la Unidad Académica Ins-
tituto de Investigaciones y, al año siguiente,
se incorporó la carrera de Citotecnología,
de dos años de duración, que tiene como
antecedente el curso de Citotecnología
que el CEMIC había dictado durante más
de 20 años con el apoyo del Dr. Guillermo
Terzano y la Dirección Argentina Filantró-
pico-Asistencial de Citología del Cáncer (DAFACC) y del Gobierno de la Ciudad
Autónoma de Buenos Aires.
En el 2006, el Mercosur Educativo acredi-
tó la carrera de Medicina, y se constituyó en
una de las tres carreras de Medicina de la Ar-
gentina que cuenta con esta acreditación. En
2008, la Carrera de Medicina del IUC pasó a
integrar, junto con la Universidad Nacional del
Tucumán, el Programa de Movilidad Estudiantil
de las carreras acreditadas por el Mercosur.
Las carreras dictadas por el IUC
En la actualidad, el IUC dicta las carreras de
Medicina y de Citotecnología. En el 2009, se
prevé la apetura de la carrera de Enfermería. El
25% de los alumnos que cursan estas carreras
cuenta con becas renovables anualmente de
2750 años
acuerdo con su rendimiento académico.
La carrera de Medicina se destaca por ofre-
cer al alumno conocimientos teóricos actua-
lizados con base científica y capacitación en
metodología de la investigación. Además de
aprender las habilidades requeridas para la
salud, el estudiante desarrolla actitudes con
fundamento en la bioética y en un enfoque
científico-antropológico, social y humanístico.
Se incentiva la autoevaluación y la educación
médica continua, y el alumno entra en con-
tacto con el enfermo desde primer año de la
carrera.
A su vez, el graduado aprende el manejo de
la relación con el paciente y su familia, con-
siderando los aspectos emocionales. Funda-
mentalmente, se compromete a favorecer el
respeto por la vida a partir de la aplicación de
principios éticos.
Desde 1958 hasta 2003, 1026 médicos cur-
saron parte o la totalidad de la Carrera de
Medicina de la UBA en el CEMIC. A partir del
2004 hasta mediados del 2008, 59 médicos
fueron formados en el IUC.
La carrera de Citotecnología tiene como
objetivo formar profesionales capacitados
para reconocer anormalidades celulares en
las muestras provenientes de los distintos ór-
ganos y aparatos que comprenden el cuerpo
humano.
La currícula abarca todos los aspectos ac-
tuales de la Citología, base de la acción de los
médicos patólogos en esa área. Esto permite
a los alumnos contar con la información con-
ceptual necesaria para constituirse en sus ayu-
dantes y colaboradores, tanto en las tareas de
rutina como en las más complejas.
Desde 1982 hasta 2002, 166 citotecnólogos
fueron formados en el CEMIC. Desde 2003
hasta mediados del 2008, el IUC ha formado a
28 profesionales en Citotecnología.
La carrera de Enfermería tiene como objeti-
vo brindar al profesional conocimientos técni-
cos y científicos que le permitan fundamentar
los cuidados al paciente. A su vez, se fomenta
28 50 años
el desarrollo de habilidades y actitudes nece-
sarias para ofrecer una atención de enferme-
ría integral al individuo.
A través de un completo plan de educación,
se pretende formar profesionales capaces de
desarrollar un juicio crítico ante los complejos
problemas de salud de la población. También
se plantea el desarrollo de aptitudes para el
uso racional de la tecnología y se promueve la
producción del conocimiento para enfermería
a través de la investigación, la formación y la
actualización continua.
Formación de Posgrado
De la Dirección de Posgrado del IUC, de-
penden las carreras de especialización, las re-
sidencias universitarias y los cursos de capa-
citación y actualización de graduados, que se
hacen de forma presencial y a distancia.
Desde 1959 hasta mediados del 2008, unos
803 profesionales se formaron en las Residen-
cias. Luego, 134 Médicos Especialistas obtu-
vieron el título universitario en el IUC, desde
1999 hasta 2008.
Las carreras de especialización se estable-
cieron sobre la base de las residencias médicas.
En la actualidad, se desarrollan nueve carreras
básicas y cuatro posbásicas, todas acreditadas
por la CONEAU. Al finalizarlas, se recibe el
título de médico especialista en cada una de
estas disciplinas. Las residencias universitarias
comprenden Dermatología y Odontología.
El perfil del egresado, trazado para las ca-
rreras de especialización y las residencias uni-
versitarias, señala que su formación le brinda
los elementos necesarios para desarrollar las
actividades asistenciales, docentes y de inves-
tigación en forma autónoma en la especialidad
elegida.
Acto de colación de grado en la Academia Nacional de Medicina.
2950 años
El progreso de la salud, en manos de la investigación científica
n médico no sólo necesita tener los cono-
cimientos más actualizados y la información
más completa para decidir medidas diagnós-
ticas o terapéuticas; también requiere tener
actitudes para saber cómo analizar aquellas
informaciones novedosas. Debe tener la ha-
bilidad de ver lo que sucederá y adaptarse. A
su vez, en su rol, el investigador difunde sus
aprendizajes, se nutre a través de congresos
o publicaciones y forma a otros investigado-
res, participando activamente en el avance de
la ciencia.
Por ello, la integración entre investigación y
docencia es una tarea que exige mucho, pero
que rinde sus grandes frutos. Su mayor éxi-
to será la de formar profesionales abiertos
al cambio, a la renovación permanente. Con
la investigación, no sólo se logran progresos,
también se genera un modo de pensamiento
innovador.
Por ello, el CEMIC siempre ha incentivado
la formación de investigadores de todas las
áreas del conocimiento relacionadas con la
salud. Esto posibilita que sus miembros es-
tén actualizados. Los beneficios de la inves-
tigación continua son numerosos. Principal-
mente, con ellos se han logrado mejorar los
tratamientos para algunas enfermedades a
partir de nuevos descubrimientos o tecnolo-
gías más avanzadas.
U
CAPÍTULO IV
30 50 años
La mayoría de las actividades científicas se realiza con
proyectos en colaboración y de intercambio con diver-
sas entidades.
RESUMEN DE PARTE DE LA ACTIVIDAD DESARROLLADA ENTRE
1990 Y 2008:
publicaciones: 1777.participación en libros: 299.
presentaciones en congresos: 2824.premios recibidos: 197.
PRODUCCIÓN ABUNDANTEInvestigación y docencia, de la mano
Para el CEMIC, la investigación y la educación son las herramientas más
viables para transformar la atención médica. Las figuras del docente y del
investigador se han integrado gracias a la “Unidad Académica Instituto de
Investigación”, en el IUC. Este programa promueve la introducción y el
afianzamiento de nuevas estrategias de educación médica, como la lectura
crítica de las publicaciones, la práctica médica Basada en la Evidencia y el
aprendizaje razonado a partir del análisis de problemas.
El afán por la investigación en el CEMIC es considerado una actividad
central y fundamental de la vocación médica. Y no queda aislada a un grupo
determinado de profesionales, sino que se expande a todos los niveles y
las áreas de la medicina.
Las primeras exploraciones
Desde los inicios del CEMIC, sus investigadores realizaron importan-
tes aportes a la comunidad, a través de la investigación de la enfermedad
de Chagas-Mazza, de la Fiebre Hemorrágica Argentina, conocida como
el “mal de los rastrojos”, y de los estudios en inmunología de enfer-
medades reumáticas y enfermedades renales crónicas. Las significativas
conclusiones de dichos trabajos fueron premiadas por la Academia Na-
cional de Medicina y dieron lugar a numerosas publicaciones nacionales
e internacionales. A su vez, estas líneas se diversificaron en decenas de
otras, en las áreas de investigación clínica, básica y experimental.
En los últimos años, asimismo, el Centro ha intensificado en América
Latina las investigaciones clínicas y epidemiológicas de envergadura en
temas como las anomalías congénitas, los trastornos cardiovasculares
y, en nuestro país, el desarrollo intelectual de los niños provenientes de
comunidades desprotegidas.
Esta producción científica es llevada a cabo por la propia institución
en colaboración con entidades tales como la misma Academia Nacional
de Medicina, universidades nacionales y extranjeras, hospitales munici-
pales y provinciales, con apoyo del Consejo Nacional de Investigaciones
Científicas y Técnicas (CONICET), la Organización Mundial de la Salud
(OMS) y fundaciones nacionales y extranjeras.
3150 años
Un aporte a la comunidad
El primer trabajo de investigación y tratamiento que realizó el CEMIC sobre la Fiebre Hemorrági-ca Argentina (FHA) fue un aporte a la comunidad. En el año 1972, recibió el Premio Mariano Castex, un galardón importante que otorga la Academia Nacional de Medicina al mejor trabajo clínico del año.
Para estudiar y tratar la enfermedad, se armaron dos equipos colaborativos: uno Clínico, conforma-do por miembros del CEMIC, y otro del Instituto MALBRAN, para trabajar en virología e investiga-ción en el terreno, todo bajo la dirección del Dr. Antonio M. Vilches.
Desde 1965 a 1969, nos instalamos en Pergamino, en la provincia de Buenos Aires, junto a un grupo de residentes, médicos, bioquímicos, técnicos de laboratorio y una jefa de enfermeras que instruyó inicialmente a las profesionales que allí estaban. En total, estudiamos 157 enfermos de la FHA, es de-cir, se trataba de una epidemia importante. Todos los enfermos tenían un diagnóstico serológico o virológico positivo.
Inicialmente, por tres años, nos instalamos en el Hospital San José, de Pergamino, donde nos dieron dos salas. Allí nos ofrecieron todo lo que necesitá-bamos para reacomodarlas. Los últimos dos años, nos mudamos a un hospital de las afueras (Hospi-tal de Llanura), que actualmente lleva el nombre del Dr. I. Maiztegui, en su memoria.
Tras diversos estudios, pudo tratarse la enferme-dad gracias al plasma de convaleciente y a la vacuna desarrollada a fines de 1967. Se tomaron medidas para disminuir la cantidad de roedores y se dismi-nuyeron los cercos en los sembrados. Además, la mecanización de la cosecha evitó que viniera gente del norte a trabajar, y por ende, los lugareños esta-ban protegidos con la vacuna. Actualmente, gracias a todo ello, hay muy pocos casos de FHA.
Por Dr. Edgardo R. Schwarz
32 50 años
Un impulso al espíritu de investigación
El CEMIC ha destinado una gran cantidad de recursos humanos y
económicos a la investigación científica, pues la considera clave para
el desarrollo de la asistencia médica. Por lo mismo, para promover la
incorporación de nuevos profesionales a la actividad, se llevan a cabo
varias acciones. Entre las iniciativas que merecen destacarse, figuran el
Premio Estímulo a la Investigación Científica para Residentes, los Sub-
sidios para Proyectos de Investigación de Profesionales menores de 35
años y las Becas de Reinserción de Profesionales que se han perfeccio-
nado en el exterior, para que continúen las actividades de investigación
que han desarrollado.
Por otra parte, los investigadores desarrollan sus proyectos en el CE-
MIC, a través de recursos propios y otros también obtenidos median-
te financiamiento externo, proveniente tanto de organismos públicos
como privados. A lo largo de los años, se ha mantenido el Programa de
Intercambio Científico con diversos organismos nacionales e interna-
cionales.
El Department of Health & Human Services (Office of Human Re-
search Protections) de los Estados Unidos ha reconocido la labor del
Comité de Ética en Investigación del CEMIC. Esto ha generado una
extensa interacción con investigadores, directores de importantes pro-
yectos de Latinoamérica, dirigidos a mejorar las condiciones de salud
en nuestros países, tanto en el área médica como social.
3350 años
Actualmente, el 10 de abril, fecha de nacimiento, en el año 1887, del principal asesor científico del CEMIC, el Dr.
Bernardo Houssay, se conmemora el Día del Investigador Científico. Fue el primer científico latinoamericano
distinguido con el Premio Nobel de Medicina y Fisiología, en 1947. A largo de sus 84 años de vida, escribió más
de 500 documentos científicos y numerosos libros.
En todo momento, promocionaba el avance del hombre, como dijo en alguna oportunidad: “No deseo estatuas,
placas, premios, calles o institutos cuando muera. Mi voluntad es que no se haga nada de eso. Mis esperanzas
son otras: deseo que mi país contribuya al adelanto científico y cultural del mundo actual, que tenga artistas,
pensadores y científicos que enriquezcan nuestra cultura y cuya obra sea beneficiosa para nuestro país, nues-
tros compatriotas y la especie humana”. Hoy sigue siendo un ejemplo de investigador de inigualable prestigio.
¡FELIZ DÍA, INVESTIGADOR CIENTÍFICO!
Una sobresaliente experiencia
El avance en investigación que se logró junto al Instituto
Latinoamericano de Fisiología de la Reproducción (ILAFIR)
puede considerarse como una de las experiencias científi-
cas más destacadas de la historia del CEMIC.
El Instituto, creado en 1969, concentraba a una serie de
profesionales que desarrollaban tareas de investigación en
el Observatorio de Física Cósmica de San Miguel. A co-
mienzos de los `70, realizaba estudios sobre la interacción
entre la luz ambiental y la reproducción. Este trabajo gene-
ró el interés de los profesionales del CEMIC, quienes ar-
maron un programa interdisciplinario con el ILAFIR. Gra-
cias a dicho programa, los residentes del Centro pudieron
concretar cursos de perfeccionamiento en investigación
en el Instituto, que se disolvió en 1977.
Ante esta situación, el CEMIC, mediante la gestión del
Dr. Armando Mendizábal, le ofreció al equipo unas nuevas
instalaciones en el barrio de Saavedra. Aquella edificación
34 50 años
requería ser puesta en funcionamiento, y los
miembros aceptaron el desafío. En apenas seis
meses y gracias a generosos aportes desintere-
sados, lograron equipar el Centro.
Fue así como, en la década del ´80, el ILAFIR
pasó a integrarse al CEMIC. En esta nueva eta-
pa de su refundación, el grupo pasó a llamarse
Centro de Investigación en Reproducción Hu-
mana y Experimental (CIRHE).
Parte del importante subsidio que el CIRHE
obtenía de la Organización Mundial de la Salud
se reinvirtió en la compra de una colonia de
primates que provenía del Instituto de Cien-
cias Básicas de Asunción del Paraguay. Por otro
lado, el CIRHE contribuyó con la participación
de profesionales de dicho centro, para que
profundizaran su educación científica.
En virtud a los avances logrados y el aporte
al conocimiento, el Centro fue declarado de In-
terés Legislativo por la Cámara de Diputados
de la Nación en el año 2001.
En la década del ´70, se creó el Centro de
Histocompatibilidad para favorecer el trasplan-
te de órganos, que se mantiene hasta nuestros
días. En aquella época, existía el Centro Único
Coordinador de Ablación e Implante (CUCAI),
antecedente del actual Instituto Nacional Cen-
tral Unico Coordinador de Ablación e Implante
(INCUCAI), que requería de un asesor técnico
científico como el CEMIC. Mediante el Centro
de Histocompatibilidad, se logró desarrollar un
polo de estudio, de investigación y de asisten-
cia técnica en el nivel nacional. Actualmente esa
entidad ha alcanzado una reconocida fama por
la importante labor desarrollada.
Junto al CONICET
Acompañando estas novedades, la Unidad
de Neurobiología Aplicada (UNA) nació a
partir de la cooperación entre el CEMIC y el
CONICET, que formalizaron su relación en
1988. Hoy en día la UNA continúa dedicán-
dose a la reconstrucción y recuperación de
circuitos nerviosos dañados.
Actualmente, el CONICET reconoce a la
Dirección de Investigación del CEMIC como
una Unidad Asociada. Como el CONICET es
el principal organismo dedicado a la promo-
ción de la ciencia y la tecnología en la Argen-
tina, este reconocimiento es un orgullo para
la institución, que reafirma así sus objetivos
fundacionales. Ser una Unidad Asociada impli-
ca un convenio por el mérito a su relevancia
científico-tecnológica dentro del Sistema Na-
cional de Ciencia y Tecnología.
Investigación y ética
Con tanto crecimiento, el CEMIC ha necesita-
do de una excelente organización para continuar.
La Dirección de Investigación ha resultado ser
muy útil: unifica toda la información, estimula y
asiste a los distintos grupos, que tienen la liber-
tad de elegir los temas para indagar. A su vez, eva-
lúa los proyectos y coordina el apoyo necesario
para el manejo administrativo de los subsidios.
Asimismo, de acuerdo con las pautas y las re-
comendaciones internacionales, en 1996 se creó
el Comité de Ética en Investigación para encua-
3550 años
Durante los últimos 18 años, el CEMIC ha sido distinguido con más de 197 premios de organismos nacionales y
extranjeros, gracias a sus cuantiosos aportes a la investigación médica.
La Fundación Konex premia anualmente y en ciclos de 10 años, a distintas ramas del quehacer nacional. En 1998,
el CEMIC recibió el premio Konex de Platino como entidad de Investigación Científica y Tecnológica.
El Dr. Narciso Ocampo, ex Presidente del CEMIC, recibe el Premio.
PREMIOS Y MÁS PREMIOS
drar todas los proyectos de la institución. Si bien
el investigador tiene la libertad de elegir el tema,
está sujeto a los conceptos de ética y de bien
común establecidos por la comunidad científica
nacional e internacional, fundados en los princi-
pios establecidos en las Declaraciones de Nu-
remberg y Helsinki, e impulsados por la OMS.
Una red internacional
En la atualidad, el CEMIC mantiene rela-
ciones con distintas instituciones nacionales
e internacionales, con el fin de estrechar la
cooperación científica y solidificar la for-
mación de sus investigadores. Varios grupos
de investigación del CEMIC han recibido
distintas visitas y evaluaciones de expertos
representantes de organismos argentinos y
del exterior, como la Fundación Kellog y la
Fundación Rockefeller, entre otros.
Gracias a su participación en congresos y
foros, y en publicaciones periódicas en revis-
tas científicas, el CEMIC ha ganado prestigio
entre los centros académicos más renom-
brados.
Las investigaciones de la institución le va-
lieron el reconocimiento y el apoyo de enti-
dades destacadas como la Academia Nacio-
nal de Medicina, la Secretaría de Ciencia y
Técnica, el Ministerio de Salud y Acción So-
cial de la Nación, y las ya mencionadas OMS,
OPS y el CONICET. Los reconocimientos
de organismos tan importantes son un estí-
mulo para seguir adelante.
36 50 años
Unidades y programas de investigación del CEMIC
A lo largo de los años, se han ido intensificando
las investigaciones clínicas y epidemiológicas sobre
enfermedades prevalentes. Abarcan lo máximo posi-
ble: desde aspectos moleculares hasta psicosociales y
éticos. Toda la información se guarda en una base de
datos ordenada y se difunde para que sea una fuente
de consulta. Actualmente, las unidades y programas
del CEMIC son las siguientes:
• Centro de Investigación en Reproducción Hu-
mana y Experimental (CIRHE)
El CIRHE es el único Centro Universitario de la
Argentina y, uno de los pocos del mundo, que posee
facilidades para la cría y conservación de primates. A
su vez, es uno de los 180 centros distribuidos en el
globo que colaboran con la Organización Mundial de
la Salud en la investigación de la salud reproductiva.
Contribuye al conocimiento biomédico con publica-
ciones en revistas científicas y libros especializados.
Además, el CIRHE posee un área de reproducción,
cría y mantenimiento de roedores que se emplea para
trabajos de docencia e investigación.
• Programa Internacional de Control de Cali-
dad Externo en Análisis Clínicos (ProgBa)
Para asegurar la calidad de los análisis clínicos en La-
tinoamérica, en el CIRHE funciona el Programa Inter-
nacional Buenos Aires de Control de Calidad Externo
en Análisis Clínicos ProgBA, actualmente extensión
universitaria del IUC. Fue creado con el auspicio de la
Organización Mundial de la Salud (OMS) y de Agencia
Internacional de Energía Atómica (AIEA).
• Estudio Colaborativo Latinoamericano de
Malformaciones Congénitas (ECLAMC)
Aún se desconocen las causas por las que se origi-
nan más de la mitad de las malformaciones congénitas.
Para estudiar e implementar acciones preventivas se
creó, en 1967, el Estudio Colaborativo Latinoamerica-
no de Malformaciones Congénitas, (ECLAMC). Cabe
destacar que es el primero en su tipo en América
latina y uno de los pioneros en el mundo.
El programa utiliza la metodología y tecnología ade-
cuadas para la investigación, registro y vigilancia de
los defectos congénitos en países subdesarrollados.
En 1989, por su gran desempeño, el ECLAMC fue de-
signado Centro Colaborador por la OMS.
Desde su creación, ha estudiado más de 3 millones
de nacimientos ocurridos en 12 países latinoamerica-
nos. Esto constituye un archivo de datos especializa-
do y de alta complejidad, que a su vez sirve para im-
plementar acciones asistenciales, capacitar recursos
humanos y generar normas diagnósticas, terapéuticas
y preventivas.
El ECLAMC tiene una de sus sedes en la Dirección
de Investigación del CEMIC.
• Unidad de Virología (UNVIR)
La Unidad de Virología realiza investigaciones en
Virología clínica y básica. Actualmente, estudia la epi-
demiología, el diagnóstico y los cuadros clínicos de
los virus respiratorios, tanto los clásicos como los
nuevos virus, recientemente descubiertos. Otra de
las líneas de trabajo incluye el diagnóstico de virus
en pacientes inmunocomprometidos. Estas nuevas de-
terminaciones luego son transferidas al Laboratorio
de Virología Clínica de CEMIC para ser aplicados en
asistencia y así realizar el diagnóstico virológico en
pacientes.
3750 años
Las investigaciones sobre características de los vi-
rus detectados tienen importancia para el desarro-
llo de futuras vacunas. La UNVIR está integrada por
investigadoras y técnicas de CONICET, becarios de
diferentes filiaciones y tesistas de maestrías y doc-
torados.
• Unidad de Neurobiología Aplicada (UNA)
Esta Unidad del CEMIC fue creada con apoyo del
CONICET en el año 1989, bajo la Dirección del Dr.
Jorge A. Colombo, con el fin de estudiar los proce-
sos de organización cerebral durante el desarrollo,
y los de reorganización subsiguiente a una lesión.
Actualmente cuenta con subsidios para investigación
del CONICET, el FONCYT e institutos privados. Los
temas de estudio han incluido: las posibilidades de
reparación por trasplante celular o entrenamiento
cognitivo en modelos de parkinsonismo experimen-
tal; las consecuencias de la enfermedad de Alzheimer
y del Síndrome de Down sobre células de la corteza
cerebral típicas de los primates humanos y no huma-
nos –y ausentes en las otras especies–, caracterizadas
por este laboratorio; los efectos del enriquecimiento
físico ambiental durante el desarrollo, sobre marca-
dores específicos de células de la corteza cerebral; y
el impacto de las condiciones de pobreza sobre el de-
sarrollo cognitivo en niños. Las investigaciones tienen
un alto significado tanto en el campo de la medicina
como en áreas afines del conocimiento. Por ejemplo,
sobre la base de los estudios vinculados con el desa-
rrollo de niños en condiciones de necesidades básicas
insatisfechas y satisfechas, se han realizado pruebas
piloto en diversas escuelas de la ciudad de Buenos
Aires, distritos de la provincia de Buenos Aires y en
la ciudad de Salta, dirigidas a evaluar la posibilidad
38 50 años
de minimizar los efectos en el nivel cognitivo de las
condiciones de pobreza. Por su parte, los estudios
comparados de la corteza cerebral en primates han
abierto una nueva perspectiva sobre su organización
estructural y funcional. Finalmente, esta Unidad ha
tenido el enorme privilegio de poder contribuir al
análisis de la corteza cerebral de una persona con
talentos especiales, como Albert Einstein.
• Servicio de Investigación y Rehabilitación
Neuropsicológica (SIREN)
El Servicio de Investigación y Rehabilitación Neu-
ropsicológica, se dedica a estudiar los problemas de
memoria u otras alteraciones cognitivas. Es un servicio
multidisciplinario que ofrece el CEMIC con un gran re-
conocimiento por dedicarse al diagnóstico, seguimiento
médico y rehabilitación de los problemas de memoria u
otras alteraciones cognitivas y conductuales secundarias
por enfermedades neurológicas (enfermedad cerebrovas-
cular, enfermedad de Alzheimer, traumatismos de cráneo,
entre otras).
La característica diferencial que tiene es que consiste
en un servicio multidisciplinario, integrado por neurólo-
gos, psiquiatras, psicólogos, fonoaudiólogos, psicopedago-
gos y musicoterapeutas que abordan los problemas de
modo integral. Cada profesional trabaja con el paciente y
el familiar desde su especialidad, pero de modo integrado,
trabajando con objetivos comunes.
3950 años
Asistencia médica: el lugar central del paciente
l CEMIC garantiza una alta calidad médica, basada en la más actualizada y completa capacitación de sus profesionales.
Gracias a su constancia en actividades de docencia y de investigación, logra mejorar, día a día, el servicio al paciente.
E
Los servicios asistenciales ofrecen todas las complejidades: atención ambulatoria; exámenes complementa-
rios de diagnóstico; prácticas; internación clínica, quirúrgica y obstétrica; cirugía fetal y neonatológica; unidad
de internación pediátrica; terapia intensiva; unidad coronaria; diálisis; trasplantes de riñón, páncreas y médula
ósea; y servicios de rehabilitación física, cardiovascular y neuropsicológica, entre otros.
El cuidado se realiza en los ocho Centros Médicos de atención ambulatoria y en las dos sedes del Hospital
Universitario. Asimismo, el CEMIC posee servicios de emergencias médicas en el Hospital Universitario.
EL SERVICIO MÁS COMPLETO
Entre sus principios fundacionales, se mantiene el
compromiso de hacer una medicina humana y completa,
según los cánones tradicionales de la profesión, comple-
mentándola con las novedades asistenciales y técnicas
que vayan apareciendo en el mundo.
La conformación del grupo médico en departamen-
tos es otra característica que distingue a la institución,
que cuenta con diez departamentos y cuatro servicios
con sus respectivos jefes responsables. Como en todo
equipo, siempre hay alguien que apoya y controla a otro,
y éste, a su vez, evalúa y estimula a otro, que facilita la
mejor calidad en atención en un marco académico.
El servicio de salud de siempre, una empresa de hoy
Crecer tanto en conocimientos, recursos humanos,
infraestructura y tecnología ha sido un propósito que el
CEMIC se ha propuesto para ofrecer la mejor asistencia.
CAPÍTULO V
40 50 años
En los años ́ 80, gracias a una eficiente estructu-
ración de apoyo, se logró respaldar la visión del
CEMIC de un modo moderno y organizado.
En 1992 se crearon los Círculos de Calidad, a
través de los cuales se identifican los problemas
y se analizan las soluciones posibles. Allí partici-
pan todos los que componen el CEMIC, lo que
posibilita una fluida e informal comunicación
con los usuarios internos y externos.
El accionar diario de una institución que crece
Para valorar la labor del CEMIC, es funda-
mental conocer los departamentos que lo
componen. A continuación, le ofrecemos un
recorrido por todos sus sectores.
AÑO CONSULTAS EGRESOS HOSPITALARIOS PARTOS CIRUGÍAS
1961 104.852 1.193 0 89
1971 132.844 1.623 0 1.463
1981 126.165 2.144 363 2.250
1991 274.528 3.348 479 3.478
2001 558.763 6.340 845 9.692
2008 690.195 7.777 1.100 13.103
RESUMEN DE PARTE DE LA ACTI-
VIDAD ASISTENCIAL DESARRO-
LLADA ENTRE 1961 Y 2008.
231 trasplantes de medula ósea,
y 846 trasplantes renales,
de los cuales 30 fueron renopancreáticos.
DESDE SU INICIO HASTA EL
1/10/08, SE REALIZARON
4150 años
Departamento de Medicina
Desde el origen de la institución funciona el
Departamento de Medicina Interna, al que lue-
go se le fueron agregando otros departamentos
médicos para mejorar la atención y cubrir las
demandas de los pacientes. Con el curso de los
años, ha ido aumentando el número de seccio-
nes y profesionales que lo integran.
Se inició originalmente en el Centro Médi-
co Las Heras y en la actualidad desarrolla sus
funciones en el Hospital Universitario sede Las
Heras y sede Saavedra y en los Centros Médi-
cos Talcahuano, Montserrat, Caballito, Belgrano,
René Baron-San Isidro y F. H. Pombo de Rodrí-
guez y Rodríguez Peña.
En el hospital universitario, funcionan los cen-
tros de internación clínica que cuentan con el
sistema de Residencia en Medicina Interna. To-
dos los pacientes son internados serán asistidos
por un equipo médico conformado por los Jefes
de Internación y los residentes, su médico de ca-
becera y los especialistas que se requieran.
Este sector cuenta con 14 secciones dedi-
cadas a la más alta calidad médica: Cardiología,
Clínica Médica, Dermatología, Endocrinología,
Gastroenterología, Hematología, Hemostasia y
Medicina Transfusional, Hepatología, Infectología,
Nefrología, Neumonología, Neurología, Nutri-
ción, Oncología y Reumatología.
Departamento de Cirugía
Las más complejas intervenciones de to-
das las especialidades quirúrgicas son abor-
dadas por este sector. Las guardias asegu-
ran la atención de urgencias en el Hospital
Universitario, todos los días, en cualquier
horario. Las intervenciones quirúrgicas se
realizan en este hospital, que cuenta con
siete quirófanos equipados con todas las
medidas de seguridad con respecto a asep-
sia, equipos de anestesia, instrumental de
alta calidad y control del paciente.
Departamento de Ginecología y Obs-
tetricia
Los profesionales de esta especialidad
entienden la importancia de la salud de la
mujer. Todo el personal médico y paramédi-
co está capacitado para ofrecer el cuidado
ginecológico preciso, teniendo en cuenta
las necesidades físicas y emocionales en
cada ciclo vital.
El CEMIC cuenta con un centro de alta
complejidad, conducido por profesionales
especializados y reconocidos, que ofrece
el control y seguimiento del embarazo, así
como de las complicaciones que en él pu-
dieran producirse. Los médicos trabajan
coordinadamente en equipo, para asegurar
el mejor tratamiento posible para la mujer
y para su bebé.
42 50 años
han quedado con secuelas o discapacidades
puedan desenvolverse por sus propios medios,
integrándose a la vida cotidiana.
El Departamento es dirigido por un médico
fisiatra, y de él dependen distintos servicios y
sectores con un equipo de profesionales ca-
pacitados. Por tratarse de un hospital general,
posee una estructura de apoyo con recursos
humanos y tecnológicos como para resolver
los problemas médicos colaterales de los pa-
cientes (exámenes complementarios, inter-
consultas con todas las especialidades, etc.).
El sector dispone de un gimnasio terapéutico
totalmente equipado, gabinetes para tratamien-
to individual de terapia física, salas de terapia
ocupacional para niños y adultos, gabinetes de
terapia del lenguaje, psicología, musicoterapia y
psicopedagogía.
Departamento de Pediatría
El CEMIC considera que cada niño y cada
adolescente, tanto en la salud como en la en-
fermedad, debe ser comprendido no sólo indi-
vidualmente, sino como miembro de una familia
y de una sociedad. Sólo englobando a cada pa-
ciente de esta manera se lo puede ayudar de
forma humana y comprensible. Para mejorar la
calidad de vida de los pequeños, se intenta pro-
mover hábitos y estilos de vida sanos mediante
actividades de educación sanitaria.
Departamento de Psiquiatría
Los tratamientos psicoterapéuticos indivi-
duales, grupales, familiares y de pareja hoy en
día tienen que ser breves y con objetivos de-
finidos. Los tratamientos psicofarmacológicos
están basados en el uso racional de nuevos psi-
cofármacos, más efectivos y con menos efectos
adversos.
El Departamento forma parte de la red de
centros de rotación del Instituto Superior de
Formación de Posgrado de la Asociación de
Psiquiatras Argentinos, afiliada a la Facultad de
Medicina de la Universidad Nacional de Buenos
Aires, y es centro para la rotación del Posgrado
en Psicología Clínica de la Universidad Católica
Argentina.
Departamento de Rehabilitación
El objetivo de este Departamento es ofre-
cer un tratamiento integral basado no solo en
aspectos puramente médicos, sino también en
su alto contenido humanístico. La rehabilitación
entra en escena para que aquellas personas que
4350 años
Departamento de Análisis Clínicos
El Laboratorio del CEMIC cuenta con un
plantel formado por profesionales con estudios
de grado en Bioquímica Clínica, especializados
en distintas áreas con formación de posgrado.
La tecnología utilizada para el diagnóstico clíni-
co es de última generación, y la certeza se basa
en estrictos controles de calidad internos y
externos. El proceso de identificación de mues-
tras de pacientes está asegurado por la utiliza-
ción de código de barras, y todo el proceso está
certificado por la Norma ISO 9001-2000.
El Departamento realiza más de 1.200 estu-
dios diferentes, de los cuales el 25% son de alta
complejidad, lo que resume un total de más de
1.200.000 determinaciones por año. Por esto, y
de acuerdo con los parámetros internaciona-
les de la OMS, el Laboratorio del CEMIC está
categorizado como Laboratorio de Alta Com-
plejidad.
Al mismo tiempo, se reciben muestras de
todo tipo desde distintos centros del país y se
brinda asesoramiento a empresas de diagnósti-
co y a laboratorios de mediana y baja compleji-
dad. La seguridad, confiabilidad, confidencialidad
y rapidez de los estudios son la preocupación
constante del departamento, además de una
atención confortable y contenida de cada uno
de los pacientes.
Departamento de Enfermería
El Departamento de Enfermería del CEMIC
tiene una gran trayectoria y se ha ido profe-
sionalizando para ofrecer un mejor servicio. Un
tiempo después de la apertura de la institución,
CAMAS DISPONIBLES SUPERFICIE CUBIERTA
1996 / 1997 2007 / 2008
513.000 1.300.000
3.500
35.600
5.000
1958
1997
1998
1999
2000
2001
2002
2003
2004
2005
2006
2007
2008
0
10.000
15.000
20.000
25.000
30.000
35.000
40.000
45.000
años
m2180
3020
1958
1997
1998
1999
2000
2001
2002
2003
2004
2005
2006
2007
2008
0
40
60
80
100
120
140
160
180
200
años
camas
44 50 años
se planificó la organización del Departamen-
to, tomando como proyecto a los egresados
de la Escuela de Enfermería de Salud Públi-
ca. Más tarde, se incorporaron profesionales
egresados de la Universidad de Buenos Aires.
A partir de los años ´90, se ha puesto espe-
cial énfasis en su formación y capacitación, a
través de becas para que el personal auxiliar
de Enfermería alcance su nivel profesional.
También se han ido ofreciendo concursos de
capacitación continua que perduran hasta la
actualidad y el diseño curricular de la futura
carrera en el año 2009.
Departamento de Odontología
Este Departamento se apoya en una red
de centros propios y prestadores zona-
les ubicados conforme a la distribución
geográfica de los afiliados. Los profesio-
nales del staff son seleccionados cuando
cumplen los requisitos de formación y de
acreditación en la especialidad a la cual se
incorporan. En el área preventiva, en con-
junto con el Departamento de Pediatría,
se cumple anualmente con el Plan Preven-
tivo Preescolar, en consultorios propios o
grupales.
Departamento de Imágenes
El Departamento, que dispone de la más
avanzada tecnología en diagnóstico por imá-
genes, ofrece una atención personalizada de
calidad, a través de una estrecha comunicación
con los médicos que solicitan los estudios. Para
ello, el CEMIC cuenta con radiología, mamogra-
fía, ecografía, tomografía computada, resonancia
magnética de 1.5 Tesla, intervencionismo radio-
lógico, dos cámaras gamma de última genera-
ción y el PET-CT, el primer equipo de este tipo
en América Latina y uno de los 20 que existen
en el mundo.
4550 años
SERVICIOS MÉDICOS
Medicina Familiar
Entre los diversos servicios del CEMIC, se
puede destacar el de Medicina Familiar, que
es el primero en el país. Frente a una espe-
cialización médica cada vez más pronunciada,
el servicio pretende retomar el viejo espíritu
de la medicina: la del paciente como unidad
bio-psico-social. Es decir, un individuo que es
afectado por el medio en el que está, por las
situaciones que lo rodean. El médico familiar
es, según conceptos de la OMS, el primero y
el principal en la atención, aquel que forma la
primera línea sanitaria de las personas. Gra-
cias a su contacto íntimo, confiado y conti-
nuado con el paciente y su entorno familiar,
pone énfasis en la prevención, promoción y
educación para la salud.
Servicio de Anatomía Patológica
El Sector ha funcionado en forma ininte-
rrumpida desde la creación de la institución,
y cuenta con un reconocido prestigio interno
y externo. Es un laboratorio de alta comple-
jidad, uno de los más avanzados en el nivel
privado, y es de referencia, pues recibe estu-
dios y consultas de diversos centros de todo
el país.
El Servicio utiliza las más avanzadas técni-
cas, y es responsable del estudio de biopsias
y de piezas quirúrgicas, así como de los estu-
dios citológicos y de las autopsias. Ha iniciado
en 2008 el Biobanco Institucional.
Servicio de Anestesiología
Con el objetivo de brindar la mejor cali-
dad en la atención anestesiológica a los pa-
cientes del Hospital Universitario, el servicio
de Anestesiología se encuentra presente en
las áreas quirúrgicas, de diagnóstico y de
tratamiento en las diversas especialidades
médicas. Está conformado por profesionales
especialistas en anestesiología, diagnóstico y
tratamiento del dolor, cardiología y técnicos
en anestesia.
Servicio de Medicina Laboral
Desde la promulgación de la Ley de Ries-
gos del Trabajo, en el CEMIC se ha imple-
mentado el Servicio de Medicina Laboral,
con la necesaria dinámica para actualizar
permanentemente las prestaciones. Así se
logra dar respuestas concretas y positivas
a las Aseguradoras de Riesgos del Trabajo
que confían la atención de sus beneficia-
rios.
Al igual que en los departamentos y ser-
vicios, las actividades se complementan con
ateneos, clases y con la participación de los
médicos y técnicos en conferencias y en
congresos nacionales e internacionales.
46 50 años
“El lugar donde volví a nacer”
Una noche, sentí que se me había roto la panza y le pedí a mi mujer que hiciera algo urgente porque me moría. Como no sabíamos adón-de ir, mi mujer comenzó a leer una lista de lugares posibles, y cuando mencionó al CEMIC decidimos partir enseguida.
Llegué a la guardia sintiendo muchísimo dolor y horas después me desperté tras una operación complicada. Tristemente, no tuve una evolución esperada porque a la semana siguiente decidieron operar-me nuevamente. Entré en un estado de sopor muy grande y desperté 15 días después. Desde mi entrada al CEMIC y mi despertar, ya había pasado un mes.
Estuve en terapia intensiva en un coma medicamentoso, pero cada tanto se me iba el efecto y al despertar encontraba a la enfermera que me cuidaba. Me acuerdo que al abrir los ojos estaba Linda, la enfermera, que era mi sol. También recuerdo las caras de los médicos, que en aquel momento eran jóvenes residentes que hoy tendrán alrededor de 40 años. Estaba muy cuidado por los médicos, la super-visora y las enfermeras, a quienes puedo nombrar individualmente porque las recuerdo muy bien.
Cuando finalmente pude salir, todo el CEMIC me esperaba en el pasillo. Tras tres meses de estar internado, era una especie de niño mimado. En todo momento, creían que iba a morir, por ello le habían dicho a mi mujer que se despidiera de mí. Incluso me dieron la extre-ma unción a pedido de mi primo. Pero pude salir adelante.
Desde que me fui, cada tanto pasaba a saludar a todos. Me decían: “Sos uno de los pocos pacientes que cuando se va, vuelven”. Pero ¿cómo no iba a regresar? ¡Si es el lugar donde volví a nacer!
Y así continuó una relación con el CEMIC que se fue prolongando. Un día, vino a hablarme la supervisora de Enfermería, Aída Benítez, porque querían hacer un homenaje a los enfermeros en su día. Me contó que su idea era armar una obra teatral para ese fin de año, y quería que yo lo guiara. Cuando vi el entusiasmo, decidí compro-meterme para dirigir a un grupo de teatro que se mantuviera en el tiempo. Así formamos el “Elenco Inestable”.
Yo siento un aprecio muy grande por la institución, especialmente por la gente que lo compone. Actualmente, confío la atención de mi mujer y mi hijo en el CEMIC. No me queda más que agradecimiento por todo lo que hicieron por mí.
Por Rubén Ballester - Ex paciente del CEMIC
4750 años
La medicina del nuevo milenio
on los rápidos avances del nuevo siglo, el CEMIC ha ido creciendo en calidad y ha implementado modernas tecnologías. A su
vez, le ha ido asignando una gran importancia a los programas de acción comunitaria y cultural.
CAvanzando hacia el futuro
A lo largo del tiempo, se han realizado numerosos acuer-
dos con otras instituciones, lo que le ha dado la posibilidad
al centro de mejorar las condiciones de trabajo del perso-
nal profesional, hacer más eficiente el servicio, actualizar la
tecnología y mantenerse hasta la fecha con equipamientos
de última generación. Poco a poco, la institución ha ido
mejorando sensiblemente las condiciones de confort y
aumentando su estructura. También ha ido mejorando la
capacidad de prestación de servicios, cumpliendo con los
más altos estándares de calidad.
CAPÍTULO VI
48 50 años
El Hospital Universitario sede Saavedra se
convirtió en el primer Hospital del país en
certificar la norma ISO 14001, que rige la
gestión medioambiental. Prevenir la conta-
minación, cumplir con la legislación aplicable
y mejorar continuamente la gestión son los
requisitos que impone la norma.
ISO 14001: PIONEROS EN EL PAÍS
El Hospital Universitario sede Saavedra obtuvo la acredita-
ción con mérito otorgado por el Instituto Técnico para la
Acreditación de Establecimientos de Salud (ITAES). Esto im-
plica que cumplió con los 35 estándares preestablecidos y
todas las recomendaciones de cada uno de ellos.
ACREDITACIÓN CON MÉRITO
Mayor comodidad y seguridad, con las tecno-
logías más avanzadas
Para ofrecer el mejor servicio, se necesi-
tan las tecnologías más modernas. El CEMIC
ha ido adquiriendo nuevos equipos para
ofrecer lo mejor. Un ejemplo de ello es el re-
sonador de última generación que puso a la
institución a la vanguardia de los estudios de
imágenes en el año 2007 y el novedoso Ser-
vicio PET-CT, que consiste en un tomógrafo
por emisión de positrones combinado con
tomografía computada helicoidal multicorte.
Se trata del Gemini 64 TF de Philips, un equi-
po de última generación, único en su tipo en
toda Latinoamérica.
Además de las tecnologías necesarias para
el mejor tratamiento médico, se han ido in-
corporando instalaciones que mejoran el
ambiente, como equipos de aire acondicio-
nado para evitar la contaminación ambien-
tal de áreas críticas y la interconexión de
computadoras que une a todos los centros
y permite estar conectados on line. En resu-
men, a lo largo de los años, se han realizado
diversas refacciones, remodelaciones y am-
pliaciones que han implicado una sus-
tancial mejora en la comodidad y bio-
seguridad, tanto para pacientes como
para profesionales y técnicos.
Acompañando estos cambios tecno-
lógicos, el CEMIC fue la única institu-
ción del área de la salud que integró el
Grupo Exportador Tecnológico Argen-
tino (GETA) a principios de este nuevo
milenio. Convocado por la Cancillería
Argentina, el GETA se creó con el fin
4950 años
En diciembre de 2001, se concluyó satisfac-
toriamente la auditoría final efectuada por el
organismo alemán TUV Reheinland-Berlín-
Brandenburg. El laboratorio de Análisis Clínicos
que funciona en el Hospital Universitario sede
Saavedra fue el primer sector que calificó y
certificó las Normas ISO 9002, lo que demos-
tró un excelente nivel de trabajo integral.
CERTIFICACIÓN NORMAS ISO
En el año 2008, autoridades del CEMIC inauguraron el Servicio PET-CT, un equipo único en América Latina.
de internacionalizar la ciencia y téc-
nica argentinas. Bajo el auspicio del
Ministerio de Relaciones Exteriores,
Comercio Internacional y Culto, se
reunieron algunas instituciones de alto
prestigio con reconocidos méritos y trayecto-
ria. Incluso en la actualidad, cada organización
representa distintas áreas del conocimiento y
de la tecnología, y su integración como grupo
permite poner en el primer plano interna-
cional la realidad actual del desarrollo en in-
vestigación, tecnología aplicada, ingeniería,
salud, educación y energía atómica para uso
civil, entre otros.
La experiencia realizada por el grupo en
el 2002 en Chile y Uruguay favoreció su
fortalecimiento y permitió el mejor desa-
rrollo de las estrategias para la exportación
tecnológica, llevando en sus propuestas no
sólo productos de desarrollo tecnológico,
sino también conocimientos.
50 50 años
Apertura al mundo
Además de integrar el GETA, el CEMIC
ha estado liderando otros proyectos de
gran envergadura internacional. Fue la ins-
titución elegida de la Argentina para coor-
dinar el “Proyecto Carmela”, que fue el ma-
yor estudio epidemiológico sobre factores
de riesgo cardiovascular hecho en América
Latina. En total, se evaluaron factores de
riesgo de 11.200 personas de la Argentina,
Chile, Colombia, Ecuador, México, Perú y
Venezuela.
Dos años más tarde, el CEMIC, por de-
signación del Banco Mundial y junto con la
Consultora Bértora y Asociados, asesoró
hasta el año 2007 al Ministerio de Salud de
la Nación en la revisión de planes de sa-
lud materno-infantiles. Asimismo, el CEMIC
ganó otro proyecto del Banco Mundial, jun-
to con la misma consultora, para realizar
una “Auditoría Concurrente del Proyecto
Funciones Esenciales de Salud Pública” du-
rante cuatro años.
Gracias a sus avances en materia de
salud, el CEMIC recibió importantes visi-
tas, como la de delegados de la OMS en
el 2008, y realizó convenios globales. Por
citar algunos, el Instituto Nacional de Sa-
lud de los EE. UU. fue a informarse sobre
el funcionamiento del Comité de Ética en
Investigación. También se formalizó un con-
venio con la República de Bolivia, por el cual
los licenciados de la carrera de Enfermería
podrían completar su formación en el Insti-
tuto Universitario IUC.
Atención médica gratuita a la población sin
recursos
El Centro de Salud La Unión-CEMIC fue
fundado en marzo de 1989 en el Barrio Avia-
ción del partido de San Fernando, como par-
te de un convenio entre la Municipalidad de
5150 años
San Fernando, la Sociedad de Fomento “La Unión”
y el CEMIC. Los médicos residentes del Servicio
de Medicina Familiar, supervisados en forma per-
manente por profesionales del CEMIC, prestan
atención médica gratuita a la población sin recursos
del barrio. Asimismo, los alumnos de la carrera de
Medicina del IUC concurren a este Centro de Salud
para completar su formación universitaria.
La atención incluye prevención, educación para
la salud, atención de patología prevalente, prácticas
comunitarias e investigación. En el último año, se
atendieron 7.200 consultas y se realizaron 18.000
prácticas de enfermería.
Centro de Salud La Unión-CEMIC
Médicos del Centro de Salud La Unión - CEMIC, dan clases de educación para la salud a los chicos del barrio
52 50 años
Un gran avance que muchos recordarán
fue la primera operación de un bebé antes
de nacer. En el año 2000, se creó el Centro
Prenatal, que desarrolló el Programa de Ci-
rugía Fetal. Se constituyó en el primer cen-
tro, fuera de los EE.UU., en realizar proce-
dimientos quirúrgicos antes del nacimiento
y que permitió corregir malformaciones
congénitas. El 26 de julio de 2001 nació en
el CEMIC el primer bebé operado antes
de nacer. Es la primera operación de este
tipo que se realiza fuera de los EE. UU.
CIRUGÍA PRENATAL El CEMIC se moviliza
La modernización avanza, y el CEMIC se pone
en marcha. A través de un convenio con Philips,
se instaló un equipo de tomografía computada
de última generación en un vehículo especial-
mente adaptado para recorrer las rutas del país,
para brindar atención médica gratuita a las po-
blaciones más desprotegidas en las localidades
del interior.
Para la dirección médica del proyecto, Philips
eligió al CEMIC, que designó a un equipo de pro-
fesionales del Servicio de Radiología y se unió al
programa. La Unidad Móvil comenzó su gira en
1999 y realizó más de 6.500 tomografías com-
putadas gratuitas a personas sin recursos en la
ciudad de Buenos Aires y 60 localidades del inte-
rior del país, en Entre Ríos, Corrientes, Misiones,
Buenos Aires, Formosa, chaco, Santa Fe, Tucumán,
Salta y Jujuy.
Cuidando el medioambiente
Acompañando el avance hacia una mejor ca-
lidad asistencial en la comunidad, la institución
se ha esforzado por dar un paso adelante en
el cuidado del medioambiente. El CEMIC fue el
primer hospital de la ciudad de Buenos Aires en
cambiar la modalidad en el tratamiento de resi-
duos patológicos. Es decir, el Hospital sistemá-
ticamente envía sus residuos patológicos a una
planta fija de tratamiento mediante el método
de esterilización para evitar la generación inne-
cesaria de gases propia del sistema antiguo de
incineración.
En forma simultánea, la institución adhirió a
Health Care Without Harm (HCWH) (The
campaign for environmental responsible Health
Care), lo que le permitió estructurar jornadas de
difusión en instalaciones del IUC con la conduc-
ción de expertos norteamericanos y latinoame-
ricanos.
El compromiso de servir a la comunidad
Siguiendo con la responsabilidad de asistir
a la sociedad, el CEMIC ofrece conferencias,
foros y Ciclos de charlas sobre Salud, que
consisten en conversaciones abiertas con el
objetivo de educar y ayudar a prevenir en sa-
lud. Con este fin, se realizó, con el auspicio
del Gobierno de la ciudad de Buenos Aires,
el curso “Educación para la Salud y Agentes
Multiplicadores en la Comunidad Educativa”,
dirigido a los miembros de la comunidad edu-
cativa primaria y secundaria comprometidos
con la promoción y prevención de la salud
del niño. El Departamento de Psiquiatría se
reunió con los líderes de las comunidades re-
ligiosas para capacitarlos en la detección de
depresión de sus fieles.
Otra actividad que realizó el CEMIC para
ayudar y vincularse con la comunidad fue
participar en la Exposalud. En el stand, con-
tó con un sistema informático denominado
Chequeo Emocional-Cognitivo, que permitía
que las personas que concurrían a la exposi-
ción pudieran realizarse distintos exámenes y
retirar un informe de recomendación según
los resultados obtenidos. Alrededor de 500
personas realizaron el estudio, que estaba ba-
sado en pruebas de memoria, de coeficiente
intelectual, de ansiedad y depresión. Parte del grupo que participó en la primera ciru-gía prenatal realizada fuera de los EE.UU.
La noticia de la operación salió en la tapa del dia-rio La Nación.
5350 años
Iniciativas a favor de la salud en Virreyes
El CEMIC y otra asociación sin fines de lu-
cro, el Virreyes Rugby Club, firmaron un acuer-
do de alianza estratégica con el objeto de su-
mar esfuerzos y experiencia para la asistencia
a la comunidad de Virreyes. De este modo, se
implementan estrategias de cooperación en el
desarrollo de iniciativas que beneficien la pre-
vención de adicciones, la educación para la salud,
los procesos de socialización y de formación de
la persona, entre otros.
Actividades culturales
Desde su nacimiento, el CEMIC prestó espe-
cial atención a todas las manifestaciones de la
cultura, por ello lleva a cabo diversas actividades
que promueven el desarrollo cultural.
El Coro, más que una expresión artística
El Coro del CEMIC es un espacio de expre-
sión que une a profesionales, alumnos, personal,
afiliados, amigos y vecinos desde 1996. El coro
está activo durante todo el año, y sus presenta-
ciones son gratuitas y abiertas a la comunidad.
Ha organizado ciclos de encuentros corales con
numerosos invitados, ha sido invitado a cantar
El Coro del CEMIC, durante una velada en el Teatro Colón. El conventillo de la Paloma, a cargo del grupo teatral del CEMIC.
en otras instituciones y ha participado en la
grabación de discos y en conciertos sinfónicos
corales. Debido al interés que ha despertado, en
el 2004, se creó un grupo alternativo para gen-
te sin experiencia en el canto, con la idea de ir
adquiriendo los conocimientos y la experiencia
para integrar el coro oficial.
El arte y la cultura del CEMIC
Sabiendo la implicación psicológica que tiene
estar en un hospital, se ha intentado generar un
ambiente agradable para quienes permanecen
allí. A lo largo del tiempo, también se fueron re-
decorando las instalaciones y se han ido exhi-
biendo obras de arte y fotográficas interesantes.
En la sede René Baron del CEMIC, en San Isidro,
se renevan las obras mensualmente desde hace
10 años.
Televisión al servicio de la salud
A su vez, las salas de espera y las habitaciones
de internación del Hospital Saavedra cuentan
con una señal interna de televisión de progra-
mación propia con notas médicas, notas de inte-
rés general e información institucional.
“El Elenco Inestable”, el grupo de teatro
más saludable
En abril de 2003, un grupo de enfermeros del
CEMIC decidió agasajar a sus compañeros con
una obra de teatro en el Día Nacional de la En-
fermería. Eligieron una obra y convocaron a mé-
dicos, estudiantes, enfermeros, administrativos,
técnicos, personal de mantenimiento, de lim-
pieza, y todo aquel que tuviera alguna inquietud
de sumarse a este festejo. Rubén Ballester, actor,
director, docente y ex paciente del CEMIC, fue
invitado como director a esta experiencia que
buscaba integrar a los distintos sectores inter-
nos de la Institución y hacer donaciones a pa-
rroquias, cooperadoras e instituciones de bien
público con los alimentos no perecederos re-
caudados en las funciones.
El grupo fue bautizado como “Elenco Inesta-
ble”, porque en los ensayos muchas veces los
integrantes deben salir a atender alguna emer-
gencia propia de su especialidad. Obras como
Una viuda difícil, de Conrado Nalé Roxlo; Saverio,
el cruel, de Roberto Arlt; Mandinga en la sierra,
de Lo Russo y De Rosa; La llegada del batallón,
de Sánchez Gardel y El conventillo de la Paloma,
de Alberto Vaccareza, le dieron al grupo una im-
pronta de teatro que prioriza el humor, el gro-
tesco y el rescate de la actuación de los grandes
cómicos y comediantes.
En el 2007, el “Elenco Inestable” recibió uno
de los premios más importantes del ámbito tea-
tral, por su labor comunitaria: el premio “Floren-
cio Sánchez”. En 2008 el grupo fue galardonado,
nuevamente por su labor comunitaria, con el
premio “María Guerrero”.
54 50 años
Dr. Enrique C. Gadow.
PRESIDENTES DEL CEMIC
Dr. Norberto Quirno.Dr. Narciso C. Ocampo.
Dr. Oscar G. Mandó. Dr. Armando F. Mendizábal.
Dr. Roberto M. Arana.
(1958 a 1972)(1972 a 1978 y (1993-2000)
(1978 a 1993)(2000 a 2001)
(2001 a 2005) (2005 hasta la actualidad).
5550 años
SEDES
HOSPITAL UNIVERSITARIO
SEDE LAS HERAS
Av. Las Heras 2900
HOSPITAL UNIVERSITARIO
SEDE SAAVEDRA
Av. E. Galván 4102
CENTRO MÉDICO F. H. POMBO
DE RODRÍGUEZ
Av. Cnel. Díaz 2423
CENTRO MÉDICO BELGRANO
3 de Febrero 2120
CENTRO MÉDICO CABALLITO
Av. Rivadavia 6044
CENTRO MÉDICO MONSERRAT
Hipólito Yrigoyen 1210
CENTRO MÉDICO TALCAHUANO
Talcahuano 1234
CONSULTORIOS MÉDICOS
LAS HERAS
Av. Las Heras 2867
CENTRO MÉDICO R. BARON.
SAN ISIDRO
J. J. Díaz 857 - San Isidro
CENTRO MÉDICO RODRÍGUEZ PEÑA
Rodríguez Peña 1046/48
SEDE ADMINISTRATIVA
Av. Las Heras 2939
CAPITAL FEDERAL Y GRAN BUENOS AIRES
www.cemic.edu.ar
La Fundación Norberto Quirno es una entidad sin fines de
lucro que fue creada en 1978 en memoria del fundador del
CEMIC. Trabaja junto a la institución para recaudar fondos
que contribuyen al desarrollo de la Ciencia Médica, en las
áreas de docencia, investigación y asistencia. Los recursos
de la fundación provienen de contribuciones de empresas y
donaciones personales.
Su modo de aportar a la ciencia es a través del otorgamien-
to de becas y subsidios para residentes, del financiamiento
de viajes de científicos argentinos al exterior y de cursos
de posgrado, y de la invitación de científicos extranjeros.
LA FUNDACIÓN NORBERTO QUIRNO
Queremos agradecer especialmente a quienes cola-
boraron en la realización de este libro:
Dr. Miguel Alfredo Figueroa;
Dr. Félix Etchegoyen;
Dr. Héctor Molfino;
Dr. Roberto Bruzzone;
a las Licenciadas Maricruz Barcia, Camila Trigo de
Achával y Cynthia Castro, por su invalorable cola-
boración en la tarea de recopilación histórica y su
aporte en la presentación de este trabajo.
Y a todos los que hicieron, hacen y harán posible el
trabajo arduo, innovador y apasionado del CEMIC.
AGRADECIMIENTOS
56 50 años
INNOVACIÓN AL SERVICIO DE LA SALUD ARGENTINA
LOS PRIMEROS PASOS DE LA TRANSFORMACIÓN MÉDICA
EDUCACIÓN
INVESTIGACIÓN CIENTÍFICA
ASISTENCIA MÉDICA
LA MEDICINA DEL NUEVO MILENIO
Capítulo I -
Capítulo I I -
Capítulo I I I -
Capítulo I V -
Capítulo V -
Capítulo VI -
ÍNDICEPág. 03 - 12
Pág. 13 - 18
Pág. 19 - 28
Pág. 29 - 38
Pág. 39 - 46
Pág. 47 - 55
Pág. 56FUNDACIÓN NORBERTO QUIRNO Y AGRADECIMIENTOS
Se autoriza la reproducción del contenido de este libro, citando la fuente e informando previamente al Área de Comunicación
Institucional del CEMIC: [email protected].
Este libro se imprimió en FP Impresoraen noviembre de 2008.
www.cemic .edu.ar