Lamentaciones 5:21

V.B. La Biblia nos enseña que

si nos revelamos contra Dios y sus mandatos, sufriremos las consecuencias de nuestras malas decisiones.

Si le hemos ofendido, volvamos a Dios de todo corazón porque Él es bueno con los que buscan.

V.B.A.

El título de este libro es un libro de lamentos.

El escritor derrama su corazón con gran angustia y pena a causa del gran sufrimiento de Jerusalén en manos de sus opresores babilónicos en el 587 a.C.

leer los cinco poemas que conforman este libro puede resultar una experiencia desgarradora. Los lactantes mueren de hambre en brazos de sus madres Los niños desfallecen por falta de alimentos en las calles donde

jóvenes y viejos yacen muertos.

ekah ¿cómo?

1ª Jerusalén Desolada

• (1:1-22)

2ª Jerusalén Destruida• (2:1-22)

3ª Jerusalén Asolada• (3:1-66)

4ª Jerusalén Asediada• (4:1-22).

5ª Oración del Profeta• (5:1-22)

El libro de Lamentaciones pertenece a la sección del Antiguo Testamento que los rabinos judíos llamaban los Escritos.

Era parte de los cinco rollos que fueron reunidos para ser leídos en una u otra de las fiestas judías. Lamentaciones era leído el día nueve del mes de Av, (julio-agosto de nuestro calendario) día de duelo por la destrucción del templo.

El libro consta de cinco poemas (cinco capítulos en la Biblia). Los primeros cuatro están en

forma acróstica. Es un modelo muy complicado, pero hay quienes sugieren que una honda emoción suele adaptarse mejor a una estricta disciplina de estilo.

Los poemas están escritos en forma de endechas o cantos fúnebres.

La tradición se lo atribuye al profeta Jeremías. Los poemas parecen contener las notas y observaciones de un

testigo ocular y las calamidades mencionadas tienen las mismascausas tanto en Lamentaciones como en Jeremías.

En ambos libros aparecen figuras y representacionessimilares tales como: “hija de Sion” (Lm.2:18; Jer.4:31) “Queja contra los pecados de los sacerdotes y profetas” (Lm.2:14;

4:13 cf Jer.5:31) “Matanza de los propios hijos” (Lm.2:20; 4:10; Jer.19:9). “Vana confianza en los aliados” (Lm.1:2 y 19; Jer.2:18).

Tanto en Lamentaciones como en Jeremías se percibe lamisma sensibilidad solidaria con el pesar nacional. El autorquién quiera que haya sido, debió haber sido un testigopresencial.

Error:Dios nos va a librar

de la calamidad porque nos ama.

Respuesta bíblica: Si bien es cierto que Dios es amor,también es cierto que es justo; debemos recordar quela destrucción de Jerusalén fue el resultado de undesafío a las ordenanzas de Dios, y la trágica situaciónque vivió el pueblo de Israel se ve realzada por lacomprensión de que pudo ser evitada. Debemosrecordar que la Escritura es clara al respecto y si nosempeñamos en desobedecer A Dios y sus ordenanzas,Él nos va a corregir como el padre que corrige a su hijoque ama (He.12:5-6). No olvidemos que a Dios no sólole interesa nuestro bien aquí en la tierra sino tambiénnuestro bien eterno.

Como creyentes nos preguntamos por qué atravesamos por situacionesdifíciles y muchas veces cuestionamos a Dios por la prueba que estamosenfrentando, sin embargo debemos recordar que Dios es muy pacientecon nosotros y su anhelo es que corrijamos lo que está deficiente ennuestra vida y enderecemos el camino (Is.55:7)

El pueblo de Israel tomó en poco la amonestación que el Señor les hizodurante mucho tiempo y en medio de sus calamidades tuvo que reconocerla mano castigadora de Dios para volverse a Él con sinceroarrepentimiento (Lm.5:19-22).

Evitemos dolores innecesarios en nuestra vida, familia o ministerio, volvamos al Señor si es que nos hemos apartado, si estamos viviendo una vida tibia o poco ferviente, desechemos la apatía, la indiferencia y vivamos una comunión plena con Aquél que dio su vida en la cruz del calvario por cada uno de nosotros: ¡Jesucristo!

Vivimos en medio de una sociedad corrompida y carente devalores, muchas personas que asisten a los templos no hantenido un encuentro personal con el Señor y aun los creyentesdescuidan su relación con Dios; están siendo arrastrados por lacorriente de este mundo.

Es tiempo de volvernos a Dios de todo nuestro corazóndejando la pasividad y poner todo nuestro empeño en hacer suvoluntad. Reconozcamos que hemos pecado y miremos a lo queestá por delante, el Eterno Dios escuchará nuestro ruego y harágrandes cosas en medio de Su pueblo para que las generacionesfuturas no se dobleguen ante las propuestas del mundo.

Es el tiempo porque Dios lo ha hablado “Los cielos estánabiertos” (Sal. 102:17-21).

ConclusiónHasta el día de hoy los judíos usan este libro para desahogar su pesar por los sufrimientos y dispersión de Israel.

Las Lamentaciones todavía se leen anualmente el día nueve de Ab, (alrededor de nuestro mes de julio) para conmemorar el incendio del templo.

Ahora es el tiempo propicio, ahora es el tiempo aceptable. Volvámonos a Dios antes de que sea demasiado tarde, busquemos Su rostro con corazones sinceros y dejemos nuestras malas obras.

Ilustración por Gustave Doré