lectores. como la lectura de la palabra de dios ocupa en la liturgia un puesto muy importante, desde...

50

Upload: natividad-martin-lopez

Post on 25-Jan-2016

219 views

Category:

Documents


0 download

TRANSCRIPT

Page 1: Lectores. Como la lectura de la palabra de Dios ocupa en la liturgia un puesto muy importante, desde el principio tuvo mucha importancia el ministro
Page 2: Lectores. Como la lectura de la palabra de Dios ocupa en la liturgia un puesto muy importante, desde el principio tuvo mucha importancia el ministro

Lectores. Como la lectura de la palabra de Dios ocupa en la liturgia un puesto muy importante, desde el principio tuvo mucha importancia el ministro encargado de la lectura. De tal manera que había una especie de ordenación.

No era un sacramento, pero sí una bendición muy especial del obispo. Hoy al menos se busca que se lea dignamente. Lo puede desempeñar cualquier hombre o mujer.

Page 3: Lectores. Como la lectura de la palabra de Dios ocupa en la liturgia un puesto muy importante, desde el principio tuvo mucha importancia el ministro

La palabra de Dios es parte integrante de todas las celebraciones sacramentales, no sólo en la Eucaristía. Con la Palabra los signos se hacen más vivos.

Por ejemplo se da realce al libro de la Palabra, especialmente al evangeliario, al que se lleva en procesión y se inciensa y se llevan luces. Esto es para realzar más la Palabra.

Page 4: Lectores. Como la lectura de la palabra de Dios ocupa en la liturgia un puesto muy importante, desde el principio tuvo mucha importancia el ministro

La liturgia cristiana ha heredado de la sinagoga la tradición de la lectura de la palabra de Dios en toda asamblea de oración. Así nos lo cuenta el evangelio de san Lucas cuando Jesús fue a su pueblo a celebrar el día del Señor, realizando la lectura de un pasaje del profeta Isaías, con su aplicación para el tiempo presente.

Page 5: Lectores. Como la lectura de la palabra de Dios ocupa en la liturgia un puesto muy importante, desde el principio tuvo mucha importancia el ministro

Si se proclama, es natural que debe oírse y entenderse. De aquí la importancia de la buena lectura y de que funcione lo mejor posible el sistema de megafonía.

La proclamación de la palabra de Dios tiene su lugar especial, que es el ambón.

Esta preocupación por ello es hacer que la liturgia tenga su sentido y pueda hacernos llegar mejor a Dios.

Page 6: Lectores. Como la lectura de la palabra de Dios ocupa en la liturgia un puesto muy importante, desde el principio tuvo mucha importancia el ministro

El lector debe ser apto y estar preparado. No cualquiera debería hacer la lectura. A veces se echa mano de cualquiera que no está preparado. La lectura debe ser una buena proclamación.

Page 7: Lectores. Como la lectura de la palabra de Dios ocupa en la liturgia un puesto muy importante, desde el principio tuvo mucha importancia el ministro

Cuando hay micrófono, el que lee tiene que tener en cuenta que no le basta saber leer materialmente, sino que debe saber leer ante el micrófono, ya que no es lo mismo. Al leer ante el micrófono tiene que estar, al mismo tiempo, oyéndose a sí mismo para notar si lo que dice se entiende bien.

Así pues, debe acercarse o alejarse más, debe entonar la voz; no debe gritar, como si no tuviera micrófono.

Page 8: Lectores. Como la lectura de la palabra de Dios ocupa en la liturgia un puesto muy importante, desde el principio tuvo mucha importancia el ministro

Para hacerlo más dignamente, debe saber distinguir los géneros literarios del texto sagrado. No es lo mismo leer algo narrativo que algo poético, o que algo meditativo o que algo exhortativo. Debe evitar, a ser posible, la monotonía, el tonillo, la teatralidad, gritos, voz hiriente. Cada lectura tiene su propio ritmo. Debe respetar la puntuación, las pausas, etc.

Page 9: Lectores. Como la lectura de la palabra de Dios ocupa en la liturgia un puesto muy importante, desde el principio tuvo mucha importancia el ministro

El libro debe estar bien impreso. A veces se llevan hojas sueltas, de modo que da una mala impresión; aunque esto depende de circunstancias. Hay que proveer que haya buena iluminación.

Page 10: Lectores. Como la lectura de la palabra de Dios ocupa en la liturgia un puesto muy importante, desde el principio tuvo mucha importancia el ministro

En la misa y en otras celebraciones, a la primera lectura sigue el salmo de meditación, que debe servir para profun-dizar la palabra. En una celebración solemne, al final de las lecturas, y también su explicación, es natural que venga una letanía o un testimonio de fe, como es el Credo.

Toda lectura se termina con la

respuesta aclamatoria

de la asamblea.

Page 11: Lectores. Como la lectura de la palabra de Dios ocupa en la liturgia un puesto muy importante, desde el principio tuvo mucha importancia el ministro

Por eso desde el Conc. Vat.II, para dar más amplitud a la lectura de la mayor parte de la Escritura, se ha distribuido en tres ciclos, el A, B y C. En los domingos ordinarios en el A se lee especialmente a san Mateo, en el B a san Marcos y en el C a san Lucas. El evangelio de san Juan se lee preferentemente en Pascua y en otras oportunidades.

La Iglesia está abierta a todos los textos del Antiguo y del

Nuevo Testamento.

Page 12: Lectores. Como la lectura de la palabra de Dios ocupa en la liturgia un puesto muy importante, desde el principio tuvo mucha importancia el ministro

Bueno sería que el lector prepare la lectura, para que no le coja de improviso. En esto habrá quienes necesiten una buena preparación, otros casi nada o nada. Y esto porque el que está leyendo no sólo lee, sino que está proclamando algo espiritual.

Y si además de leer con los labios, lee con el corazón, la lectura llegará más al corazón de los oyentes.

Page 13: Lectores. Como la lectura de la palabra de Dios ocupa en la liturgia un puesto muy importante, desde el principio tuvo mucha importancia el ministro

Dios nos da su palabra, pero nos la da a través de los seres humanos. En primer lugar a través de aquellos que la escribieron; pero también a través de los que la proclaman. Esta palabra se nos hará agradable a quienes la escuchamos, si primero es agradable a quien la proclama. Así esta palabra de Dios será vida y seguridad para nosotros.

Page 14: Lectores. Como la lectura de la palabra de Dios ocupa en la liturgia un puesto muy importante, desde el principio tuvo mucha importancia el ministro

Tu palabra, Señor, es vida; tu

palabra es seguridad;

Automático

Page 15: Lectores. Como la lectura de la palabra de Dios ocupa en la liturgia un puesto muy importante, desde el principio tuvo mucha importancia el ministro

Tu palabra nos hace libres, tu

palabra nos da

hermandad;

Page 16: Lectores. Como la lectura de la palabra de Dios ocupa en la liturgia un puesto muy importante, desde el principio tuvo mucha importancia el ministro

Tu palabra

es fuerte lucha;

Page 17: Lectores. Como la lectura de la palabra de Dios ocupa en la liturgia un puesto muy importante, desde el principio tuvo mucha importancia el ministro

Hacer CLICK

Page 18: Lectores. Como la lectura de la palabra de Dios ocupa en la liturgia un puesto muy importante, desde el principio tuvo mucha importancia el ministro

Después de la lectura de la Palabra de Dios, viene la homilía. La iglesia nos dice que “la homilía es parte integrante de la Liturgia de la Palabra”. 

Page 19: Lectores. Como la lectura de la palabra de Dios ocupa en la liturgia un puesto muy importante, desde el principio tuvo mucha importancia el ministro

Ya decía san Justino, en el siglo 2º describiendo lo que era la celebración eucarística: “Cuando el lector ha terminado, el que preside toma la palabra para incitar y exhortar a la imitación de tan bellas cosas”.

No es algo

nuevo o de estos tiempos.

Page 20: Lectores. Como la lectura de la palabra de Dios ocupa en la liturgia un puesto muy importante, desde el principio tuvo mucha importancia el ministro

La homilía es como la prolongación de la proclamación de la palabra de Dios. Nos recuerda a Jesús resucitado, cuando en el camino de Emaús explicaba lo concerniente a las Escrituras antes de darse a conocer en la fracción del pan. Igualmente les dice Jesús a los apóstoles reunidos que era necesario que se cumpliera lo que decían de él la ley de Moisés, los profetas y los salmos.

Page 21: Lectores. Como la lectura de la palabra de Dios ocupa en la liturgia un puesto muy importante, desde el principio tuvo mucha importancia el ministro

Con la homilía vemos que es grande la importancia que da la Iglesia a la lectura de la Sagrada Escritura, la palabra de Dios. No es sólo por aumentar el conoci-miento o la cultura, sino porque ella es vida. Para que mejor pueda ser vida, es obligatorio que al menos en los domingos haya homilía.

Page 22: Lectores. Como la lectura de la palabra de Dios ocupa en la liturgia un puesto muy importante, desde el principio tuvo mucha importancia el ministro

Así nos lo enseñan las normas litúrgicas promulgadas por el Concilio vat.II: "Se recomienda encarecidamente, como parte de la misma Liturgia (de la Palabra), la homilía, en la cual se exponen durante el ciclo del año litúrgico, a partir de los textos sagrados, los misterios de la fe y las normas de la vida cristiana. Más aún: en las Misas que se celebran los domingos y fiestas de precepto, con asistencia del pueblo, nunca se omita si no es por causa grave."

Page 23: Lectores. Como la lectura de la palabra de Dios ocupa en la liturgia un puesto muy importante, desde el principio tuvo mucha importancia el ministro

 Así pues, como nos dice la Iglesia: Los domingos y días de precepto ha de haber homilía y, solamente por un motivo muy grave, se puede eliminar de las Misas que se celebran con asistencia del pueblo.

Page 24: Lectores. Como la lectura de la palabra de Dios ocupa en la liturgia un puesto muy importante, desde el principio tuvo mucha importancia el ministro

Nos dice la Iglesia: “La función de la homilía es la de realizar una exhortación sobre las lecturas y/o el sacramento que se realiza, con el fin de hacer más inteligibles los pasajes de la Biblia que se acaban de proclamar en la asamblea litúrgica”.

Page 25: Lectores. Como la lectura de la palabra de Dios ocupa en la liturgia un puesto muy importante, desde el principio tuvo mucha importancia el ministro

Por lo anterior se deduce que la homilía tiene dos partes que se van entrelazando: La explicación de la Palabra leída y la exhortación para mejorar la vida cristiana según la orientación de dicha Palabra. Por lo tanto debe ser un comentario vivo.

Page 26: Lectores. Como la lectura de la palabra de Dios ocupa en la liturgia un puesto muy importante, desde el principio tuvo mucha importancia el ministro

La homilia no es sólo catequesis, pero tiene mucho de catequesis, de modo que Juan Pablo II la considera como uno de los momentos principales de la catequesis porque con ella se «vuelve a recorrer el itinerario de fe propuesto por la catequesis y la conduce a su perfeccionamiento natural».

Page 27: Lectores. Como la lectura de la palabra de Dios ocupa en la liturgia un puesto muy importante, desde el principio tuvo mucha importancia el ministro

Y la instrucción del Conc, Vat.II nos dice que la predicación homilética es una forma de catequesis sistemática a partir de la Palabra de Dios proclamada en la celebración. Debe estar centrada en los textos bíblicos y tiene el objetivo de facilitar el que los fieles se familiaricen con el conjunto de los misterios de la fe y de las normas de la vida cristiana.

Page 28: Lectores. Como la lectura de la palabra de Dios ocupa en la liturgia un puesto muy importante, desde el principio tuvo mucha importancia el ministro

No sólo debe explicar, sino que la predicación homilética busca fomentar la conversión de las personas a Jesucristo y mejorar la vida cristiana en todas sus exigencias, tanto de vida espiritual como testimonial y de responsabilidad social.

Page 29: Lectores. Como la lectura de la palabra de Dios ocupa en la liturgia un puesto muy importante, desde el principio tuvo mucha importancia el ministro

La Homilía, así correctamente realizada, no sólo anuncia y expone y explica la Verdad Revelada; sino que hace muchísimo bien dado que sirve a los fieles para profundizar en la Verdad Revelada y avanzar en la constante conversión y mejora de la vida cristiana.

Page 30: Lectores. Como la lectura de la palabra de Dios ocupa en la liturgia un puesto muy importante, desde el principio tuvo mucha importancia el ministro

Por todo lo cual, la homilía debe ser preparada. Puede prepararla el celebrante solo o, como felizmente se hace en algunos sitios, por un grupo de fieles, que pueden ver mejor las circunstancias de la vida que tengan relación con la Palabra leída, y porque les ayuda a ellos mismos.

Page 31: Lectores. Como la lectura de la palabra de Dios ocupa en la liturgia un puesto muy importante, desde el principio tuvo mucha importancia el ministro

Cuán deseable es que diáconos, presbíteros y obispos cuiden y preparen exquisitamente la Homilía, en la cual se muestre y se ofrezca la doctrina cristiana católica partiendo de la Palabra proclamada, siendo una prolongación de la misma.

Por eso nos dice la Iglesia:

Page 32: Lectores. Como la lectura de la palabra de Dios ocupa en la liturgia un puesto muy importante, desde el principio tuvo mucha importancia el ministro

La homilía la debe hacer el sacerdote que preside, un sacerdote concelebrante o un diácono, pero no un laico. En casos particulares y con una razón legítima, la homilía la puede hacer un Obispo o un sacerdote que están presentes en la celebración pero que no pueden concelebrar.

¿Quién debe

pronunciar la homilía?

Page 33: Lectores. Como la lectura de la palabra de Dios ocupa en la liturgia un puesto muy importante, desde el principio tuvo mucha importancia el ministro

El lugar desde donde pronunciar la homilía puede ser desde la sede, o desde el ambón (o púlpito), o, cuando sea oportuno, desde otro lugar adecuado.

Normal-mente se hace de pie, pero puede hacerse sentado, dependien-do de circunstan-cias.

Page 34: Lectores. Como la lectura de la palabra de Dios ocupa en la liturgia un puesto muy importante, desde el principio tuvo mucha importancia el ministro

La homilía no es un sermón, ni una catequesis, ni conferencia, ni instrucción, ni una plática moralizadora, sino, como lo señala su etimología, es una conversación familiar cuya finalidad es aplicar, además de explicar, el mensaje de Dios a un Pueblo creyente concreto e introducirlo a la Celebración de los sacramentos.

Page 35: Lectores. Como la lectura de la palabra de Dios ocupa en la liturgia un puesto muy importante, desde el principio tuvo mucha importancia el ministro

La diferencia esencial con un “sermón” es que éste suele ser pronunciado en circunstancias diferentes de la liturgia y normalmente sobre un tema concreto de la religión o motivos concretos de la fe.

Como el sermón de las siete palabras en una plaza.

Page 36: Lectores. Como la lectura de la palabra de Dios ocupa en la liturgia un puesto muy importante, desde el principio tuvo mucha importancia el ministro

Si la homilía es digna, la palabra de Dios podrá penetrar más en nuestro espíritu, puede hacerse vida en nuestro corazón y nos hará conducir por sendas de amor en nuestro caminar hacia Dios.

Page 37: Lectores. Como la lectura de la palabra de Dios ocupa en la liturgia un puesto muy importante, desde el principio tuvo mucha importancia el ministro

La palabra que diste

a los hombres

Automático

Page 38: Lectores. Como la lectura de la palabra de Dios ocupa en la liturgia un puesto muy importante, desde el principio tuvo mucha importancia el ministro
Page 39: Lectores. Como la lectura de la palabra de Dios ocupa en la liturgia un puesto muy importante, desde el principio tuvo mucha importancia el ministro
Page 40: Lectores. Como la lectura de la palabra de Dios ocupa en la liturgia un puesto muy importante, desde el principio tuvo mucha importancia el ministro

Tu palabra seguimos, Señor.

Page 41: Lectores. Como la lectura de la palabra de Dios ocupa en la liturgia un puesto muy importante, desde el principio tuvo mucha importancia el ministro

Hemos sentido muy dentro de nosotros

Page 42: Lectores. Como la lectura de la palabra de Dios ocupa en la liturgia un puesto muy importante, desde el principio tuvo mucha importancia el ministro
Page 43: Lectores. Como la lectura de la palabra de Dios ocupa en la liturgia un puesto muy importante, desde el principio tuvo mucha importancia el ministro
Page 44: Lectores. Como la lectura de la palabra de Dios ocupa en la liturgia un puesto muy importante, desde el principio tuvo mucha importancia el ministro

una palabra que es gozo y amistad.

Page 45: Lectores. Como la lectura de la palabra de Dios ocupa en la liturgia un puesto muy importante, desde el principio tuvo mucha importancia el ministro

La palabra

que diste a

los hombres

Page 46: Lectores. Como la lectura de la palabra de Dios ocupa en la liturgia un puesto muy importante, desde el principio tuvo mucha importancia el ministro

nos conduce

por sendas

de amor.

Page 47: Lectores. Como la lectura de la palabra de Dios ocupa en la liturgia un puesto muy importante, desde el principio tuvo mucha importancia el ministro
Page 48: Lectores. Como la lectura de la palabra de Dios ocupa en la liturgia un puesto muy importante, desde el principio tuvo mucha importancia el ministro
Page 49: Lectores. Como la lectura de la palabra de Dios ocupa en la liturgia un puesto muy importante, desde el principio tuvo mucha importancia el ministro

María es quien mejor

acogió la Palabra de Dios en su corazón.

Page 50: Lectores. Como la lectura de la palabra de Dios ocupa en la liturgia un puesto muy importante, desde el principio tuvo mucha importancia el ministro

Que Ella interceda para

que acojamos a Jesús, la

Palabra eterna del Padre.

AMÉN