lección 09 - jesús está regresando

8/20/2019 Lección 09 - Jesús Está Regresando

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Lección

09

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Sábado,

27 de Febrero de 2016

Los Hechos de los Apóstoles, pág.

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Juan 14:18, 1-3, Hechos 1:9-11; El Deseado de Todas las Gentes, pág. 617

No os dejaré huérfanos; volveré a vosotros...No se turbe vuestro corazón. Creéis en Dios;creed también en mí. En la casa de mi Padremuchas moradas hay. De otra manera, os lohubiera dicho. Voy,

pues, a preparar lugar

para vosotros. Y si voy y os preparo lugar,vendré otra vez

y os tomaré conmigo; paraque donde yo esté, vosotros también estéis.Mientras ellos le veían, él fue elevado; y unanube le recibió ocultándole de sus ojos, heaquí dos hombres vestidos de blanco se

presentaron

junto a ellos, y les dijeron: –Hombres galileos, ¿por

qué os quedáis de piemirando al cielo? Este Jesús, quien fuetomado de vosotros arriba al cielo, vendrá dela misma manera como le habéis visto ir alcielo.

Por causa vuestra vine al mundo. Estoytrabajando en vuestro favor. Cuando mevaya, se

guiré trabajando anhelosamente porvosotros. Voy al Padre para cooperar con élen vuestro favor. Iba a prepararles lugar, a finde volver aquí mismo a buscarlos.


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Juan 5:25, 28, Mateo 24:31; Los Hechos de los Apóstoles, pág. 209, El Conflicto de los Siglos. pág. 624

Viene la hora y ahora es, cuando los muertosoirán la voz del Hijo de Dios, y los

que oyenvivirán… No os asombréis de esto, porquevendrá la hora cuando todos los que estánen los sepulcros oirán su voz.

Él enviará a sus ángeles con un gran sonar detrompeta, y ellos reunirán a los esco

gidos deél de los cuatro vientos, desde un extremodel cielo hasta el otro.La voz del arcángel y la trompeta de Diosalcanzarían a los que durmieran, y los

muertos en Cristo resucitarían primero,antes que el toque de la inmortalidad seconcediera a los vivos.Pronto aparece en el este una pequeña nubenegra. Es la nube que envuelve al Salvador…Él viene, victorioso en el cielo y en la tierra,

viene a juzgar a vivos y muertos. Con cantoscelestiales los santos ángeles, en inmensa eInnumerable muchedumbre, le acompañanen el descenso. El firmamento parece llenode formas radiantes, ‘millones de millones, ymillares de millares.


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Mateo 24:26, 27, 30, Lucas 9:26; El Deseado de Todas las Gentes, pág. 688, Palabras deVida del Gran Maestro, pág. 346

Si os dicen: Mirad, está en el desierto, nosalgáis; o “Mirad, está en las habitacionesinteriores,” no lo creáis. Porque así como elrelámpago sale del oriente y se muestra hastael occidente, así será la venida del Hijo del

Hombre… Entonces se manifestará la señal delHijo del Hombre en el cielo, y en ese tiempoharán duelo todas las tribus de la tierra, yverán al Hijo del Hombre viniendo sobre lasnubes del cielo con poder y gran gloria.Cuando Cristo vuelva a la tierra, le verán como

Rey del cielo. Cristo volverá en su gloria, en lagloria de su Padre y en la gloria de los santosángeles. Miríadas y miríadas, y miles de milesde ángeles, hermosos y triunfantes hijos deDios que poseen una belleza y gloriasuperiores a todo lo que conocemos, le

escoltarán en su regreso. Entonces se sentarásobre el trono de su gloria y delante de él secongregarán todas las naciones.Cristo viene con poder y grande gloria...,habrá luz en toda morada de los santos.


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9/151 Corintios 15:51-54; Primeros Escritos, pág. 287

No todos dormiremos, pero todos seremostransformados en un instante, abrir y cerrarde ojos, a la trompeta final. Porque sonará latrompeta, y los muertos serán resucitados sincorrupción; nosotros seremos transformados.

Porque es necesario que esto corruptible seavestido de incorrupción, y que esto mortalsea vestido de inmortalidad.La tierra se estremeció violentamente cuandola voz del Hijo de Dios llamó a los santos quedormían, quienes respondieron a la

evocación y resurgieron revestidos degloriosa inmortalidad, diciendo: ‘¡Victoria!¡Victoria! sobre la muerte y el sepulcro.¿Dónde está, oh muerte, tu aguijón? ¿Dónde,oh sepulcro, tu victoria? Los santos vivientesy los resucitados elevaron sus voces en un

prolongado grito de triunfo. Aquellos cuerposque habían ba jado a la tumba con losestigmas de la enfermedad y la muerteresucitaron inmortalmente sanos y vigorosos.Los santos vivientes fueron transmutados enun momento, en un abrir y cerrar de ojos.


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11/151 Tesalonicenses 4:14, 16, 17, Juan 17:24; Maranata: El Señor Viene!, pág, 299

Si creemos que Jesús murió y resucitó, dela misma manera Dios traerá por medio deJesús, y con él, a los que han dormido.Porque el Señor mismo descenderá delcielo con aclamación, con voz de arcángel y

con trompeta de Dios; y los muertos enCristo resucitarán primero. Nosotros, losque vivimos y habremos quedado, seremosarrebatados juntamente con ellos en lasnubes, para el encuentro con el Señor en elaire; y así estaremos siempre con el Señor.

Padre, quiero que donde yo esté, tambiénestén conmigo aquellos que me has dado,para que vean mi gloria que me has dado,porque me has amado desde antes de lafundación del mundo.Nuestra identidad personal quedará

conservada en la resurrección. Lasmaravillosas obras de Dios son un misteriopara el hombre. El espíritu, el carácter delhombre, vuelve a Dios, para ser preservadoallí. En la resurrección cada hombre tendrásu propio carácter.


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13/15Mateo 24:36, 1 Tesalonicenses 5:2-4; El Evangelismo, pág. 164

Pero acerca de aquel día y hora, nadie sabe;ni siquiera los ángeles de los cielos, ni aun elHijo, sino sólo el Padre.Vosotros mismos sabéis perfectamente bienque el día del Señor vendrá como ladrón de

noche. Pero vosotros, hermanos, no estáis entinieblas, como para que aquel día ossorprenda como un ladrón.Los tiempos y las sazones son del dominioexclusivo de Dios. ¿Y por qué no nos ha dadoDios este conocimiento? Porque no haríamos

un uso correcto de él si nos lo diera. Nohemos de embarcarnos en especulacionescon respecto a los tiempos y las sazones queDios no ha revelado. Jesús dijo a susdiscípulos que velaran, pero no respecto a untiempo definido. Sus seguidores han de estar

en la posición de aquellos que escuchan lasórdenes de su Capitán; han de vigilar,esperar, orar y trabajar, mientras se acerca eltiempo para la venida del Señor; pero nadiepodrá predecir justamente cuándo vendráese tiempo; pues ‘del día y hora nadie sabe.


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15/15Mateo 24:44 1 Tesalonicenses 5:5 8 Mateo 24:45 46; Fundamentals of Christian Education pág 137

Estad preparados también vosotros, porque a lahora que no pensáis, vendrá el Hijo del Hombre.Todos vosotros sois hijos de luz e hijos del día. Portanto, no durmamos como los demás, sinovigilemos y seamos sobrios; porque los que

duermen, de noche duermen; y los que seemborrachan, de noche se emborrachan. Peronosotros que somos del día seamos sobrios,vestidos de la coraza de la fe y del amor, y con elcasco de la esperanza de la salvación.¿Quién, pues, es el siervo fiel y prudente, a quiensu señor le puso sobre los criados de su casa, paraque les diera alimentos a su debido tiempo?Bienaventurado será aquel siervo a quien, cuandosu señor venga, le encuentre haciéndolo así.No he presentado ante vosotros ninguna horadefinida, pero os he repetido el mandato de Cristomismo, de velar en oración, ‘Porque el Hijo del

Hombre vendrá a la hora que no pensáis.’ Laadvertencia ha venido resonando a través deltiempo, ‘He aquí yo vengo pronto, y mi galardónconmigo, para recompensar a cada uno según seasu obra. Yo soy el Alfa y la Omega, el principio y elfin, el primero y el último.

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