Luis Donnovan Romero AngelesMxico y el mundo IIResea sobre las Uvas de la iraEn lo particular no me gustan los premios que pretenden reconocer la importancia de una persona o una obra, porque en primer lugar esos premios deciden darlos un grupo de personas -que se dicen conocedoras del tema- sobre otros tantos que es la poblacin en general y que a travs de su juicio deciden rendir honor o no a un trabajo o persona. Es decir el trabajo de la persona habla por s mismo y segn tan bueno sea se le reconocer. Para el caso de Las uvas de la ira de John Steinbeck creo que las personas que le decidieron dar el premio Pulitzer de 1940 lograron conocer el sentir de los lectores y darle el reconocimiento, que para esos cargaba con menos tintes polticos y econmicos[footnoteRef:1]. [1: Hoy en da los premios se dan cada vez menos por reconocimiento de la obra y cada vez ms por intereses econmicos polticos o publicitarios.]

El libro retrata la historia de una familia estadounidense, los Joad, que como consecuencia de una de las crisis del sistema capitalista ms fuerte de la historia -ser igual ms o menos fuerte y catastrfica la crisis del 2008?- se ven obligadas a dejar sus tierras en Oklahoma para buscar -de modo muy similar a los mexicanos y sudamericanos que migran desde hace aos a Estados Unidos- el sueo americano, al interior de su mismo pas en el estado de California, hoy da tierra de migrantes por excelencia.La novela logra retratar de forma bastante realista lo que considero eran los ltimos aos del capitalismo salvaje que se vio interrumpido despus de la crisis de 1929 por el estado benefactor, pero que retornara en nuestra poca con el llamada neoliberalismo.Y es que la obra retrata muy bien como el da a da de la gente estaba completamente orientado al trabajo excesivo en busca de unos cuantos recursos para vivir, esto no nicamente como consecuencia de la crisis, sino que hasta esos aos salvo esferas sociales que se salan de estos parmetros (la floreciente clase media), era lo comn. Porque los burgueses y capitalistas de ese entonces comprenda completamente bien que para extraer la mayor cantidad de plus valor de sus trabajadores -ese siempre es el objetivo de los burgueses en el plano econmico- deban de hacerlos trabajar la mayor cantidad de tiempo posible, con la paga ms baja, que alcanzara nicamente para mal sobrevivir y permitiera al trabajador -obrero o agrcola- pararse al da siguiente y repetir la rutina. Ahora bien, sera interesante preguntarse qu tanto han cambiado las cosas desde la crisis de 1929 hasta nuestros das, segn hablan los liberales, las cosas han mejorado y seguirn hacindolo porque el progreso as lo ha permitido, pero yo veo desde mi perspectiva del materialismo histrico que las contradicciones son cada vez mayores y que en realidad las condiciones son muy semejantes a las de 1929 y si algo han cambiado temo decir que ha sido para peor. La prueba ms clara de ellos est en los jornaleros del norte del pas como en San Quintin, que son personas que las condiciones de miseria los han llevado a desplazarse lejos de sus comunidades, ser desarraigados del lugar donde viven e instalarse en zonas donde hay ofertas de trabajo con salarios muy bajos y en condiciones de explotacin muy preocupantes.La historia hasta ahora, como deca Walter Benjamin de ninguna forma ha sido una lnea en ascenso hacia el progreso, sino una serie de catstrofes que se han ido acumulando y que parece ser se seguirn acumulando, porque las nicas alternativas que se nos ofrecen hoy en da frente a la crisis son retornos al estado de bienestar que aunque usa polticas mucho ms benficas para la poblacin de ningn modo rompe con la explotacin y las contradicciones propias del capital.